Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Proyecto de ley:
"Título I
Efectos laborales de la enfermedad COVID-19
Artículo 3.- Salvo acuerdo en contrario de las partes, a efectos de dar continuidad a la
relación laboral durante este período, el que deberá constar por escrito, el acto o la
declaración de autoridad a que se refiere el inciso primero del artículo 1 tendrá por
consecuencia la suspensión temporal, de pleno derecho y por el solo ministerio de la
ley, de los efectos de los contratos regidos por el Código del Trabajo en el o los
territorios que correspondan, sin perjuicio de las obligaciones de los incisos siguientes.
La vigencia de la suspensión se circunscribirá únicamente al período que la autoridad
determine.
Aquellos empleadores que hayan pactado con uno o más de sus trabajadores la
continuidad de la relación laboral durante el evento del acto o declaración de autoridad
a que se refiere el inciso primero del artículo 1, deberán continuar, dentro de dicho
período, pagando y enterando las cotizaciones previsionales y de seguridad social.
Artículo 4.- En el evento señalado en el inciso primero del artículo 1, los trabajadores
de casa particular podrán impetrar el derecho a percibir el beneficio a que se refiere el
literal a) del inciso quinto del artículo 163 del Código del Trabajo. En este caso, la
Administradora de Fondos de Pensiones respectiva deberá girar de la cuenta del
trabajador, el equivalente a un 70% de su remuneración mensual imponible o el saldo
total si este fuere inferior. Si el acto o declaración de autoridad se extendiere por más
Para tales efectos, el trabajador deberá presentar una declaración jurada simple
ante la entidad pagadora del beneficio, preferentemente de forma electrónica, que dé
cuenta que no se encuentra en alguna de las situaciones descritas en el inciso tercero
del artículo 1 de la presente ley. El trabajador será personalmente responsable de la
veracidad de las declaraciones del documento.
Artículo 5.- Los empleadores cuya actividad se vea afectada total o parcialmente,
podrán suscribir con el o los trabajadores a los que se hace referencia en el inciso
primero del artículo 1, personalmente, o previa consulta a la organización sindical a la
que se encuentre afiliado, un pacto de suspensión temporal del contrato de trabajo, el
que se regirá por las normas del presente Título, sin perjuicio de las que se establecen
en los siguientes incisos. Este pacto solamente podrá celebrarse fuera de los periodos
comprendidos en el evento al que se refiere el inciso primero del artículo 1 y durante la
vigencia establecida en el inciso segundo del artículo 16.
Para los efectos del inciso anterior, se presumirá que la actividad del empleador está
afectada parcialmente, cuando en el mes anterior a la suscripción del pacto sus
ingresos por ventas o servicios netos del Impuesto al Valor Agregado hayan
experimentado una caída igual o superior a un 20% respecto del mismo mes del año
anterior.
El pacto tendrá los efectos indicados en los incisos segundo y tercero del artículo 3 y
dará lugar a la prestación señalada en el inciso primero del artículo 1, siempre que
cumpla con los requisitos del inciso primero del artículo 2. Para estos efectos, la
prestación, considerará el promedio de las remuneraciones imponibles señaladas en el
inciso primero del artículo 2.
El pacto producirá sus efectos a partir del día siguiente de su suscripción. Con todo, las
partes podrán acordar que los efectos se produzcan en una fecha posterior, la que no
podrá exceder del primer día del mes siguiente a la fecha de celebración del pacto
respectivo.
Para efecto del pago de las pensiones alimenticias debidas por ley, que hayan sido
decretadas judicialmente y notificadas al empleador, las prestaciones a que se refiere
este Título serán embargables o estarán sujetas a retención hasta en un 50% de las
mismas. Para tales efectos, el empleador, en las declaraciones juradas a que se
refieren los artículos 2 y 5, deberá señalar expresamente los trabajadores respecto de
los cuales está obligado a retener y pagar pensiones alimenticias. En estos casos, de
acuerdo a una norma de carácter general que dicte la Superintendencia de Pensiones,
la Sociedad Administradora del Fondo de Cesantía transferirá al empleador la totalidad
de las prestaciones de los mencionados trabajadores, indicando el nombre, rol único
tributario y monto de la prestación que corresponde a cada uno de ellos, a fin de que el
empleador cumpla con su obligación de retención y pago de las pensiones y pague
directamente el saldo que quedare de la prestación al trabajador.
Artículo 6 bis.- No se aplicarán las normas del presente Título I a las trabajadoras que
se encuentren gozando del fuero laboral a que hace referencia el artículo 201 del
Código del Trabajo.
Título II
Pactos de reducción temporal de jornadas de trabajo
Para la aplicación de esta ley no se podrá pactar una reducción temporal superior al
50% de la jornada de trabajo originalmente convenida.
Artículo 8.- El pacto de reducción temporal de la jornada de trabajo podrá ser suscrito
por el empleador que se encuentre en alguna de las siguientes situaciones:
Respecto de la letra d), del inciso primero de este artículo, el empleador conjuntamente
con el o los trabajadores respectivos deberán, al momento de celebrar el pacto, realizar
una declaración jurada simple ante la Dirección del Trabajo, en la que den cuenta de la
efectividad de los hechos o circunstancias descritas en el referido literal.
Sólo se podrá mantener vigente un pacto de reducción temporal de jornada por cada
relación laboral.
Para el caso del pacto suscrito en virtud de la causal de la letra d) del artículo 8, el
trabajador deberá registrar el número de cotizaciones a que se refiere el inciso primero
del artículo 2.
Para efectos de que la Dirección del Trabajo verifique que el trabajador está habilitado
para suscribir este pacto, la Sociedad Administradora de Fondos de Cesantía deberá
remitirle, por medios electrónicos y al menos mensualmente, la nómina de los
trabajadores que cumplen los requisitos de cotizaciones a que se refiere el inciso
primero cuyos empleadores estén habilitados para celebrar el pacto conforme a esta
ley.
El pacto producirá sus efectos a partir del día siguiente al de su suscripción. Con todo,
las partes podrán acordar que los efectos se produzcan en una fecha posterior, la que
no podrá exceder del primer día del mes siguiente a la fecha de celebración del pacto
respectivo..
Durante la vigencia del pacto, el empleador estará obligado a pagar y enterar las
cotizaciones previsionales y de seguridad social, correspondientes a la remuneración
imponible convenida en el pacto.
a) Individualización de las partes, con indicación del rol único tributario del empleador,
del rol único nacional del trabajador e información necesaria para materializar el pago
del complemento a que se refiere la presente ley que realizará la Sociedad
Administradora de Fondos de Cesantía;
e) Declaración jurada simple del empleador respecto a que se cumplen los requisitos
establecidos en el presente título para la celebración del pacto de reducción temporal
de la jornada de trabajo.
Artículo 13.- En el evento que alguna de las partes pusiere término al contrato de
trabajo durante la vigencia del pacto de reducción temporal de la jornada de trabajo o
después de concluido éste, las indemnizaciones legales o convencionales que el
trabajador tuviere derecho a percibir, se calcularán conforme a las remuneraciones y
condiciones contractuales vigentes con anterioridad a la suscripción del pacto, sin
considerar la remuneración que se pueda pactar en virtud del inciso tercero del artículo
Título III
Disposiciones finales
Artículo 14.- Las personas que, conforme a la presente ley, obtuvieren mediante
simulación o engaño complementos y/o prestaciones y, quienes de igual forma,
obtuvieren un beneficio mayor al que les corresponda, serán sancionadas con reclusión
menor en sus grados medio a máximo. Igual sanción será aplicable a quienes faciliten
los medios para la comisión de tales delitos. Lo anterior, es sin perjuicio de la
obligación de restituir las sumas indebidamente percibidas, con los reajustes que
conforme a derecho correspondan.
Bajo los mismos presupuestos del inciso anterior, serán también responsables los
empleadores que sean personas jurídicas, cuando dichos delitos sean cometidos por
personas naturales que estén bajo la dirección o supervisión directa de alguno de los
sujetos mencionados en el inciso anterior.
Los empleadores personas jurídicas no serán responsables en los casos que las
personas naturales indicadas en los incisos anteriores, hubieren cometido dichos
delitos exclusivamente en ventaja propia o a favor de un tercero.
Durante el tiempo de vigencia de esta ley, el hecho previsto en los incisos anteriores
será de aquellos que dan lugar a la responsabilidad penal de las personas jurídicas.
Para la determinación e imposición de sus penas, así como de las demás normas
pertinentes, se entenderá que se trata de un simple delito.
Respecto de las prestaciones que se otorguen de conformidad a esta ley, el cálculo del
promedio de las remuneraciones que en cada caso corresponde, excluirán aquellas
remuneraciones pactadas conforme al inciso tercero del artículo 1 y al artículo 7.
Las disposiciones del Título II regirán hasta el último día del mes décimo desde su
entrada en vigencia.
Artículo 17.- Las partes podrán denunciar ante la Inspección del Trabajo los
incumplimientos que se deriven de los pactos establecidos en la presente ley, sin
perjuicio de la facultad de éstas para recurrir a los Tribunales de Justicia competentes.
Los recursos fiscales aportados deberán ser reintegrados al Fisco en un plazo que no
podrá exceder los 10 años contado desde la fecha en la cual se ejecutó cada uno de
dichos retiros, cuando el valor del Fondo de Cesantía Solidario sobrepase en 1,5 veces
la magnitud indicada por el estudio al que hace referencia el inciso segundo el que en
ningún caso podrá ser superior a $2.000 millones de dólares, moneda de los Estados
Unidos de América. Asimismo, se establece que con cargo a los recursos del Fondo de
Cesantía Solidario, se efectuarán los reintegros al Fisco aplicando una tasa de interés
equivalente a la tasa de endeudamiento del Fisco a igual plazo.
Mediante decreto del Ministerio de Hacienda expedido bajo la fórmula "Por orden del
Presidente de la República", se establecerán los mecanismos para los aportes y
reintegros definidos en este artículo, sus procedimientos y modalidades, junto a las
demás normas necesarias para su realización.
Artículo 21.- Los trabajadores que hagan uso de los beneficios de esta ley, en
conformidad a lo dispuesto en los artículos 1, 5 y 7, tendrán derecho a hacer efectivos
los seguros de cesantía o cláusulas de cesantía asociadas a los créditos de cualquier
naturaleza que sean éstos, con bancos, instituciones financieras, casas comerciales y
similares, con los que mantengan deudas en cuotas u otra modalidad. Se entenderá
que el trabajador que se acoja a los preceptos de la presente ley, se encuentra en una
situación de cesantía involuntaria para todos los efectos de la cobertura de los riesgos
previstos en la póliza respectiva. La presente disposición primará por sobre lo
dispuesto en el inciso primero del artículo 22 de la Ley sobre Efecto Retroactivo de las
Leyes.
El trabajador deberá acreditar su condición de beneficiario de esta ley a través
de un certificado de su empleador, que podrá hacer llegar de manera preferentemente
electrónica a su acreedor, si es el beneficiario de la póliza, para que la compañía de
seguros, sin perjuicio de las demás estipulaciones establecidas en los seguros de
cesantía o cláusulas de cesantía asociadas a créditos, pague en cada periodo que
corresponda cada cuota que venza. El monto que la compañía de seguros pagará de
cada cuota con cargo a la póliza será proporcional a la disminución de ingresos que
experimente el trabajador para el periodo de vencimiento de la cuota respectiva. Tal
disminución de ingresos se determinará comparando (i) el promedio de las
remuneraciones devengadas en los últimos tres meses que se consideren para el
Artículo 22.- Las empresas que habiendo contratado o celebrado convenios que se
financien íntegramente con cargo a la ley de presupuestos o de subvenciones del
sector público, y que reciban de los servicios o instituciones los pagos
correspondientes, no podrán hacer uso de las prestaciones de esta ley, respecto de
dichos trabajadores.
En los casos señalados anteriormente, para los beneficiarios que hayan optado por el
pago mensual de dicho beneficio, de acuerdo lo dispone el artículo 11 de la ley N°
20.338, el monto del subsidio durante la suspensión ascenderá al valor devengado en
el mes anterior más próximo al de la declaración o acto de autoridad o a la suscripción
del pacto correspondiente.
En el caso de los beneficiarios que hayan optado al pago anual conforme a la misma
regla legal antes citada, se entenderá que el trabajador, durante los meses de la
suspensión de su contrato de trabajo, percibió una remuneración bruta correspondiente
a la percibida el mes anterior más próximo al de la declaración o acto de autoridad o a
la suscripción del pacto señalado en el inciso precedente.
Artículo 28.- Para el cálculo de las cotizaciones a que se refieren los artículos 2 y 11
de la presente ley, se considerarán como registradas las cotizaciones que el empleador
o la entidad pagadora de subsidio hubiere declarado conforme a lo dispuesto en los
incisos quinto y sexto del artículo 19 del decreto ley Nº 3.500, de 1980.
Los empleadores que, durante la vigencia de las normas del título I de la presente ley,
no hubieren pagado dentro del plazo legal la cotización obligatoria establecida en el
artículo 17, la comisión destinada al financiamiento de la administradora que se señala
en el inciso tercero del artículo 29 y la destinada al financiamiento del seguro a que se
refiere el artículo 59, todos del decreto ley N° 3.500, de 1980, y las pagaren dentro de
la vigencia de dicho Título o dentro de los veinticuatro meses posteriores a su término,
podrán pagarlas por parcialidades que no superen el antedicho plazo de veinticuatro
meses. En tal caso, no se les aplicarán los intereses, reajustes y multas establecidas
en el artículo 19 de dicho cuerpo legal, con excepción de la reajustabilidad nominal del
promedio de los últimos 12 meses de todos los fondos, si esta fuere positiva, que se
determinará calculando el promedio ponderado de la rentabilidad de todos ellos, de
acuerdo a la proporción que represente el valor total de las cuotas de cada uno, en
relación con el valor de las cuotas de todos los fondos del último día del mes anterior.
Artículo 29.- El mayor gasto fiscal que represente la aplicación de esta ley durante el
año presupuestario de su entrada en vigencia, se financiará con cargo a los recursos
del Ministerio del Trabajo y Previsión Social y en lo que faltare, con cargo a la Partida
Presupuestaria Tesoro Público.
Artículo 31.- Los directores de las sociedades anónimas abiertas, donde todos o la
mayor parte de los empleados o trabajadores tengan que hacer uso del beneficio
establecido en el artículo 5 de la presente ley, no podrán percibir honorario o dieta
alguna por el ejercicio de dicho cargo de director, superior a los porcentajes
correspondientes al seguro de cesantía, durante el período de la suspensión.
Y por cuanto he tenido a bien aprobarlo y sancionarlo; por tanto, promúlguese y llévese
a efecto como Ley de la República.
Atentamente,
Proyecto de ley:
1. En el artículo 22:
Artículo 152 quáter G.- Las partes podrán pactar, al inicio o durante la vigencia de la
relación laboral, en el contrato de trabajo o en documento anexo al mismo, la modalidad
de trabajo a distancia o teletrabajo, la que se sujetará a las normas del presente Capítulo.
En ningún caso dichos pactos podrán implicar un menoscabo de los derechos que este
Código reconoce al trabajador, en especial, en su remuneración.
Los trabajadores que prestan servicios a distancia o teletrabajo gozarán de todos los
derechos individuales y colectivos contenidos en este Código, cuyas normas les serán
aplicables en tanto no sean incompatibles con las contenidas en el presente Capítulo.
Artículo 152 quáter H.- Las partes deberán determinar el lugar donde el trabajador
prestará los servicios, que podrá ser el domicilio del trabajador u otro sitio determinado.
Con todo, si los servicios, por su naturaleza, fueran susceptibles de prestarse en distintos
lugares, podrán acordar que el trabajador elija libremente dónde ejercerá sus funciones.
Artículo 152 quáter I.- En caso de que la modalidad de trabajo a distancia o teletrabajo se
acuerde con posterioridad al inicio de la relación laboral, cualquiera de las partes podrá
unilateralmente volver a las condiciones originalmente pactadas en el contrato de trabajo,
previo aviso por escrito a la otra con una anticipación mínima de treinta días.
Si la relación laboral se inició conforme a las normas de este Capítulo, será siempre
necesario el acuerdo de ambas partes para adoptar la modalidad de trabajo presencial.
Artículo 152 quáter J.- La modalidad de trabajo a distancia o teletrabajo podrá abarcar
todo o parte de la jornada laboral, combinando tiempos de trabajo de forma presencial en
establecimientos, instalaciones o faenas de la empresa con tiempos de trabajo fuera de
ella.
El trabajo a distancia estará sujeto a las reglas generales de jornada de trabajo contenidas
en el Capítulo IV del Libro I, con las excepciones y modalidades establecidas en el
presente artículo. El empleador, cuando corresponda, deberá implementar a su costo un
mecanismo fidedigno de registro de cumplimiento de jornada de trabajo a distancia,
conforme a lo prescrito en el artículo 33.
Si la naturaleza de las funciones del trabajador a distancia lo permite, las partes podrán
pactar que el trabajador distribuya libremente su jornada en los horarios que mejor se
adapten a sus necesidades, respetando siempre los límites máximos de la jornada diaria y
semanal, sujetándose a las normas sobre duración de la jornada de los artículos 22 y 28 y
las relativas al descanso semanal del Párrafo 4° del Capítulo IV del Libro Primero.
Con todo, en el caso del teletrabajo las partes podrán acordar que el trabajador quede
excluido de la limitación de jornada de trabajo de conformidad con lo señalado en el inciso
cuarto del artículo 22. Sin embargo, se presumirá que el trabajador está afecto a la jornada
ordinaria cuando el empleador ejerciere una supervisión o control funcional sobre la forma
y oportunidad en que se desarrollen las labores.
Artículo 152 quáter K.- Además de las estipulaciones previstas en el artículo 10, el
contrato de trabajo de los trabajadores regidos por este Capítulo deberá contener lo
siguiente:
1. Indicación expresa de que las partes han acordado la modalidad de trabajo a distancia
o teletrabajo, especificando si será de forma total o parcial y, en este último caso, la
fórmula de combinación entre trabajo presencial y trabajo a distancia o teletrabajo.
2. El lugar o los lugares donde se prestarán los servicios, salvo que las partes hayan
acordado que el trabajador elegirá libremente dónde ejercerá sus funciones, en
conformidad a lo prescrito en el inciso primero del artículo 152 quáter H, lo que deberá
expresarse.
3. El período de duración del acuerdo de trabajo a distancia o teletrabajo, el cual podrá ser
indefinido o por un tiempo determinado, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 152
quáter I.
6. El tiempo de desconexión.
Artículo 152 quáter L.- Los equipos, las herramientas y los materiales para el trabajo a
distancia o para el teletrabajo, incluidos los elementos de protección personal, deberán ser
proporcionados por el empleador al trabajador, y este último no podrá ser obligado a
utilizar elementos de su propiedad. Igualmente, los costos de operación, funcionamiento,
mantenimiento y reparación de equipos serán siempre de cargo del empleador.
En aquellos casos en que las partes estipulen que los servicios se prestarán desde el
domicilio del trabajador u otro lugar previamente determinado, el empleador comunicará al
trabajador las condiciones de seguridad y salud que el puesto de trabajo debe cumplir de
acuerdo al inciso anterior, debiendo, en todo caso, velar por el cumplimiento de dichas
condiciones, conforme al deber de protección consagrado en el artículo 184.
Artículo 152 quáter N.- Conforme al deber de protección que tiene el empleador, siempre
deberá informar por escrito al trabajador a distancia o teletrabajador acerca de los riesgos
que entrañan sus labores, de las medidas preventivas y de los medios de trabajo correctos
según cada caso en particular, de conformidad a la normativa vigente.
Artículo 152 quáter Ñ.- El trabajador sujeto a las normas de este Capítulo siempre podrá
acceder a las instalaciones de la empresa y, en cualquier caso, el empleador deberá
garantizar que pueda participar en las actividades colectivas que se realicen, siendo de
cargo del empleador los gastos de traslado de los trabajadores.
DISPOSICIONES TRANSITORIAS
Artículo segundo. - Esta ley entrará en vigencia el primer día del mes siguiente a su
publicación en el Diario Oficial. El reglamento señalado en el artículo 152 quáter M deberá
adecuarse a los principios y condiciones de la ley N° 16.744 y dictarse en el plazo de
treinta días contado desde la publicación de la presente ley.
Y por cuanto he tenido a bien aprobarlo y sancionarlo; por tanto, promúlguese y llévese a
efecto como Ley de la República.
Atentamente
ORD. Nº 4299
SANTIAGO, 04.11.2014
Señala que dicho pronunciamiento se hace necesario atendido que con ocasión de
fiscalizaciones practicadas a empresas a las cuales presta asesoría, funcionarios de este
Servicio han exigido que el pago de las mismas se efectúe el “último día hábil del mes” o “el día
30 del mes correspondiente “, interpretación que no comparte sobre todo si se considera que no
es posible en términos prácticos disponer de un proceso instantáneo de cálculo de
remuneraciones que incluya el proceso de pago mediante operaciones bancarias de depósito.
El artículo 55 del Código del Trabajo, modificado por la ley Nº20.611, publicada en el Diario
Oficial de 08.08.2012, establece:
"Si nada se dijere en el contrato, deberán darse anticipos quincenales en los trabajos por pieza,
obra o medida y en los de temporada."
En efecto, según la citada jurisprudencia, para los fines previstos en el mencionado precepto, el
vocablo "mes" es aquella unidad de tiempo que dura un período continuo que se cuenta desde
un día señalado hasta otro de igual fecha en el mes siguiente, sin que sea necesario que se
extienda desde el día 1º al 28, 29, 30 o 31, de suerte que resulta posible declarar como tal, el
que va desde el día 20 de enero hasta el 20 de febrero o desde el 15 de julio al 15 de agosto.
En relación a las primeras, señala que se mantiene la misma situación anterior, por lo que éstas
deberán pagarse con la periodicidad estipulada en el respectivo contrato, siempre que no
exceda de un mes. Igualmente, si nada se estipulare en dicho instrumento, deberán darse
anticipos quincenales en los trabajos por pieza, obra o medida y en los de temporada.
Respecto del alcance de la expresión “razones técnicas” utilizadas por el legislador y cuya
existencia permitiría pagar las comisiones junto con las remuneraciones del mes siguiente, el
mencionado pronunciamiento sobre la base de la disposición sobre interpretación de la ley
establecida en el artículo 20 del Código Civil, precisa que deberá entenderse por tales las que
emanen de los procedimientos o de los distintos procesos que llevan a la determinación, cálculo
y procedencia de las comisiones existentes en la empresa, que dificultarían que ellas pudieren
ser pagadas dentro del mes en que se originaron, debiendo serlo en todo caso, de
corresponder, al mes siguiente.
Cabe expresar finalmente que de acuerdo a la modificación introducida por la ley Nº20.611 al
artículo 55 del Código del Trabajo, antes transcrito y comentado, las cláusulas que difieran el
pago de las comisiones al trabajador, infringiendo los límites o plazos anteriormente precisados,
se tendrán por no escritas.
Saluda a Ud.
Saluda a Uds.
ABOGADO
JEFE DEPARTAMENTO JURÍDICO
DIRECCIÓN DEL TRABAJO
Remuneraciones Procedencia.
2) No existe obligación de remunerar por el uso de vehículo del propio trabajador en labores
de su cargo, a menos que las partes así lo hayan acordado.
3) Deben estimarse como horas extraordinarias y, pagarse como tales, todas aquellas que
aparezcan laboradas en exceso sobre la jornada convenida por las partes.
4) Las horas extraordinarias laboradas por trabajadores remunerados con sueldo y comisión,
deben calcularse solamente en relación al monto correspondiente al sueldo, excluyéndose,
por ende, las sumas correspondientes a las comisiones.
DICTAMEN=
SINDICATO DE TRABAJADORES
1) Si resulta procedente que el empleador haga responsable al vendedor de las sumas que
no pagan sus clientes por diversas circunstancias, entre ellas, protestos de los documentos
dados en pago de las mercaderías vendidas por éstos, descontándoles los valores
correspondientes de sus remuneraciones.
2) Si es obligatorio para el empleador pagar a los vendedores por el uso de vehículos propios
de éstos en las ventas de los productos de la empresa, que se hacen en toda el área
metropolitana.
3) Si tienen derecho los trabajadores que son remunerados en base a sueldo y comisión, al
pago de horas extraordinarias y forma en que éstas deben ser calculadas y pagadas.
1) En relación a la consulta signada con este número, cabe señalar que el artículo 7º del
Código del Trabajo, dispone:
“Contrato individual de trabajo es una convención por la cual " el empleador y el trabajador se
obligan recíprocamente, éste " a prestar servicios personales bajo dependencia y
subordinación " del primero, y aquél a pagar por estos servicios una " remuneración
determinada".
Del contexto de la disposición legal transcrita se infiere que el contrato de trabajo es un acto
jurídico bilateral que genera obligaciones recíprocas para ambas partes.
Del mismo precepto aparece que las principales obligaciones que éste impone al empleador
son las de proporcionar el trabajo convenido y pagar por él una remuneración determinada y
que para el trabajador su obligación esencial es prestar los servicios para los cuales fue
contratado.
De ello se sigue que los trabajadores que prestan servicios en virtud de un contrato de
trabajo cumplen sus obligaciones contractuales realizando sus funciones en la forma
convenida en el respectivo instrumento, circunstancia, que a la vez, autoriza para sostener
que corresponde al empleador asumir aquellas que se derivan de la gestión o administración
de su empresa.
De la misma norma en comento es posible deducir, a la vez, que los dependientes que
prestan servicios en virtud de un contrato de trabajo, realizan sus funciones "por cuenta de
otro" o "por cuenta ajena" lo que de acuerdo al principio de ajenidad que caracteriza la
La doctrina enunciada precedentemente ha sido sostenida por este Servicio, entre otros, en
ordinarios Nºs 4.958-219, de 28.08.92, 5.301-215, de 14.09.92 y 4.458-205, de 01.08.94.
2) Respecto a esta consulta cabe hacer presente que revisado el ordenamiento jurídico
laboral vigente no existe disposición legal que contemple alguna remuneración por el uso de
vehículo del propio trabajador en labores de su cargo.
3) En lo que concierne a esta consulta, es necesario tener presente que el artículo 30 del
Código del Trabajo, prescribe:
" Se entiende por jornada extraordinaria la que excede del máximo " legal o de la pactada
contractualmente, si fuese menor".
Por su parte, el artículo 32 del Código del Trabajo, en sus incisos 1º y 2º, establece:
" Las horas extraordinarias deberán pactarse por escrito, sea en " el contrato de trabajo o en
un acto posterior.
" No obstante la falta de pacto escrito, se consideran " extraordinarias las que se trabajen
en exceso de la jornada " pactada, con conocimiento del empleador".
Del análisis de las normas legales preinsertas se infiere que tiene el carácter de
extraordinaria toda jornada laborada en exceso sobre las 45 horas semanales o sobre el
máximo que las partes hubieren pactado, si fuese menor.
Se infiere, asimismo, de iguales disposiciones legales que por regla general, las horas
extraordinarias deben pactarse por escrito, señalando imperativamente el legislador, que no
obstante no existir dicho pacto, se consideran también como tales las que se laboren en
exceso de la jornada convenida, con conocimiento del empleador.
En lo que respecta al pago de las horas extraordinarias, el citado artículo 32 del Código del
Trabajo, en su inciso 3º, estipula:
" Las horas extraordinarias se pagarán con un recargo del " cincuenta por ciento sobre el
sueldo convenido para la jornada " ordinaria y deberán liquidarse y pagarse conjuntamente
con las " remuneraciones ordinarias del respectivo período".
De la disposición legal transcrita se colige que las horas extraordinarias deben calcularse en
base al sueldo que se hubiere convenido, cuyo concepto está fijado por el artículo 42 letra a)
del precitado cuerpo legal, el cual establece:
" a) sueldo, que es el estipendio fijo, en dinero, pagado por " períodos iguales, determinados
en el contrato, que recibe el " trabajador por la prestación de sus servicios, sin perjuicio " de
lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 10".
Del precepto anotado se infiere que una remuneración debe ser calificada como sueldo
cuando reúne las siguientes condiciones copulativas:
De ello se sigue que todas las remuneraciones o beneficios que reúnan tales características
constituyen el sueldo del trabajador que deberá servir de base para el cálculo de las hora
extraordinarias de trabajo, excluyéndose todos aquellos estipendios que no cumplan dichas
condiciones.
Al tenor de lo expuesto, posible resulta concluir que en el caso en consulta, vale decir, de
trabajadores que se encuentran afectos al sistema remuneracional consistente en sueldo y
comisión, el cálculo de las horas extraordinarias debe efectuarse considerando solamente el
monto correspondiente al referido sueldo mensual, prescindiendo, por el contrario de los
valores correspondientes a comisiones por tratarse de remuneraciones variables que no
constituyen sueldo y que por ende, no son susceptibles de ser tomadas en consideración
para determinar el valor de las horas extraordinarias.
2) No existe obligación de remunerar por el uso del vehículo del propio trabajador en labores
de su cargo, salvo si las partes lo acordasen.
3) Deben estimarse como horas extraordinarias y, pagarse como tales, todas aquellas que
aparezcan laboradas en exceso sobre la jornada convenida por las partes.
4) Las horas extraordinarias laboradas por trabajadores remunerados con sueldo y comisión,
deben calcularse solamente en relación al monto correspondiente al sueldo, excluyéndose,
por ende, las sumas correspondientes a las comisiones.
Saluda a Ud.,
SANTIAGO, 21.07.2011
Mediante presentación del antecedente 5), Ud. ha solicitado a esta Dirección un pronunciamiento
respecto al sentido y alcance de la disposición prevista en el inciso 2º del Artículo 71 del Código del
Trabajo, precisando si para los efectos de determinar el promedio a que allí se alude deben
considerarse los últimos tres meses trabajados o las tres últimas liquidaciones de remuneraciones
que consignen treinta días laborados.
“En el caso de trabajadores con remuneraciones variables, la remuneración íntegra será el promedio
de lo ganado en los últimos tres meses trabajados.
“Se entenderá por remuneraciones variables los tratos, comisiones, primas y otras que con arreglo al
contrato de trabajo impliquen la posibilidad de que el resultado mensual total no sea constante entre
uno y otro mes.
“Si el trabajador estuviere remunerado con sueldo y estipendios variables, la remuneración íntegra
estará constituida por la suma de aquél y el promedio de las restantes.
“Sin perjuicio de lo dispuesto en los incisos anteriores, durante el feriado deberá pagarse también
toda otra remuneración o beneficio cuya cancelación corresponda efectuar durante el mismo y que no
haya sido considerado para el cálculo de la remuneración íntegra”.
Del precepto legal precedentemente transcrito, aparece que para los efectos de determinar la
remuneración íntegra que corresponde pagar a los trabajadores durante el lapso en que hacen uso
de su feriado legal, se debe atender al sistema remuneracional a que estén afectos, a saber:
c) Trabajadores sujetos a un sistema de remuneración mixta, esto es, que además del sueldo
perciben contraprestaciones variables, cuya remuneración íntegra durante el feriado estará
constituida por el sueldo, al cual corresponderá adicionar el promedio de las remuneraciones
variables percibidas en los últimos tres meses laborados.
Del mismo modo, la referida norma legal en forma expresa establece el período de tiempo que se
debe considerar en el promedio de las remuneraciones variables, entendiéndose por tales los tratos,
comisiones, primas y otras, que con arreglo al contrato de trabajo llevan a que el resultado de la
remuneración mensual total no sea constante entre un mes y otro, precisando que, para tales efectos
se debe estar a los últimos tres meses trabajados.
Así, conforme con la jurisprudencia administrativa de este Servicio, entre otros, en Ordinario Nº
2989/166 de 08.01.2009 y Ordinario Nº 075/008 de 05.01.1999, no es posible incluir dentro de los tres
últimos meses trabajados a aquel o aquellos en que se ha producido la suspensión de la relación
laboral a consecuencia de una licencia médica o permiso sin goce de remuneraciones y por el
contrario, sí cabe considerar el o los meses en que el dependiente ha incurrido en inasistencias
injustificadas a sus labores, dado que, no produce el efecto de suspender la relación laboral.
Por consiguiente, la expresión “tres últimos meses trabajados”, que consigna el precepto legal en
comento, para obtener el promedio de lo ganado por el trabajador sujeto a remuneración variable
debe entenderse referida a los tres meses con denominación específica en que se hubiere percibido
remuneración completa y que anteceden al feriado legal, de manera que si en alguno de ellos el
dependiente no generó remuneración por haber operado la suspensión de la relación laboral, deberá
excluirse y considerarse solo aquellos tres que precedan inmediatamente al mes en que se hizo
efectivo el feriado.
Con todo, cabe precisar que atendido que el personal de que se trata está afecto a un sistema
remuneracional mixto, conformado por sueldo base e incentivos variables, deberá sumarse lo
percibido por concepto de sueldo al promedio así determinado.
Saluda a Ud.,
RDIC.: Fija sentido y alcance de los incisos segundo, y cuarto del artículo 58 del Código del
Trabajo, incorporados por la ley Nº20.540, publicada en el Diario Oficial de 06.10.2011.
ANT.: Pase Nº1952, de 11.10.2011, de Jefa de Gabinete Directora del Trabajo.
FUENTES: Código del Trabajo, artículo 58. Ley Nº20.540, artículo único, publicada en el
Diario Oficial del 06.10.2011.
SANTIAGO,
Por razones de buen servicio, se ha estimado necesario fijar el sentido y alcance de los
incisos 2º y 4º del artículo 58 del Código del Trabajo, incorporados a su texto por la ley Nº
20.540, publicada en el Diario Oficial de 06.10.2011.
El artículo único de la ley citada ha modificado el artículo 58 del Código del Trabajo,
incorporándole dos nuevos incisos, el 2º y el 4º, permaneciendo los restantes incisos sin
alteración, salvo en su ordenamiento luego del agregado de aquéllos.
Como es sabido, el artículo 58 del Código del Trabajo regula los descuentos de las
remuneraciones que corresponde efectuar al empleador, y que se pueden clasificar desde el
punto de vista de su exigibilidad en descuentos obligatorios, descuentos permitidos previo
acuerdo entre el empleador y el trabajador, y descuentos prohibidos por la ley.
Ahora bien, mediante la modificación de la ley Nº 20.540 al artículo 58 del Código del
Trabajo, se ha introducido entre los descuentos permitidos previo acuerdo entre el empleador
y el trabajador, los destinados a gastos de educación del trabajador, de su cónyuge o de
alguno de sus hijos, y para el pago de mutuos, créditos o préstamos otorgados por el
empleador al trabajador para determinados fines específicos como estos mismos de
educación, y para vivienda, y la fijación de un tope general máximo para los descuentos
convenidos o pactados.
“1.- Elimínanse, en su inciso primero, las oraciones que siguen después de su primer punto
seguido, hasta su punto aparte.
“Asimismo, con acuerdo del empleador y del trabajador, que deberá constar por escrito, el
empleador podrá descontar de las remuneraciones cuotas destinadas al pago de la
adquisición de viviendas, cantidades para ser depositadas en una cuenta de ahorro para la
vivienda y sumas destinadas a la educación del trabajador, su cónyuge o alguno de sus hijos.
Para estos efectos, se autoriza al empleador a otorgar mutuos o créditos sin interés, respecto
de los cuales el empleador podrá hacerse pago deduciendo hasta el 30% del total de la
remuneración mensual del trabajador. Sin embargo, el empleador sólo podrá realizar tal
deducción si paga directamente la cuota del mutuo o crédito a la institución financiera o
servicio educacional respectivo.”
“3.- Incorpórase el siguiente inciso cuarto, nuevo, pasando los actuales incisos tercero,
cuarto, quinto, sexto y séptimo, a ser incisos quinto, sexto, séptimo, octavo y noveno,
respectivamente:
“Cualquiera sea el fundamento de las deducciones realizadas a las remuneraciones por parte
del empleador, o el origen de los préstamos otorgados, en ningún caso aquéllas podrán
exceder, en conjunto, del 45% de la remuneración total del trabajador.”
De esta manera, el texto actual del artículo 58 del Código del Trabajo, modificado por le ley
Nº 20.540, dispone:
“El empleador deberá deducir de las remuneraciones los impuestos que las graven, las
cotizaciones de seguridad social, las cuotas sindicales en conformidad a la legislación
respectiva y las obligaciones con instituciones de previsión o con organismos públicos.”
“Asimismo, con acuerdo del empleador y del trabajador, que deberá constar por escrito, el
empleador podrá descontar de las remuneraciones cuotas destinadas al pago de la
adquisición de viviendas, cantidades para ser depositadas en una cuenta de ahorro para la
vivienda y sumas destinadas a la educación del trabajador, su cónyuge o alguno de sus hijos.
Para estos efectos, se autoriza al empleador a otorgar mutuos o créditos sin interés, respecto
de los cuales el empleador podrá hacerse pago deduciendo hasta el 30% del total de la
remuneración mensual del trabajador. Sin embargo, el empleador sólo podrá realizar tal
deducción si paga directamente la cuota del mutuo o crédito a la institución financiera o
servicio educacional respectivo.”
“Sólo con acuerdo del empleador y del trabajador que deberá constar por escrito, podrán
deducirse de las remuneraciones sumas o porcentajes determinados, destinados a efectuar
pagos de cualquier naturaleza. Con todo, las deducciones a que se refiere este inciso, no
podrán exceder del quince por ciento de la remuneración total del trabajador.
“Cualquiera sea el fundamento de las deducciones realizadas a las remuneraciones por parte
del empleador, o el origen de los préstamos otorgados, en ningún caso aquéllas podrán
exceder, en conjunto, del 45% de la remuneración total del trabajador.”
“El empleador no podrá deducir, retener o compensar suma alguna que rebaje el monto de
las remuneraciones por arriendo de habitación, luz, entrega de agua, uso de herramientas,
entrega de medicinas, atención médica u otras prestaciones en especie, o por concepto de
multas que no estén autorizadas en el reglamento interno de la empresa.”
“Asimismo, no podrá deducir, retener o compensar suma alguna por el no pago de efectos de
comercio que el empleador hubiere autorizado recibir como medio de pago por los bienes
suministrados o servicios prestados a terceros en su establecimiento.”
“La autorización del empleador, señalada en el inciso anterior, deberá constar por escrito, así
como también los procedimientos que el trabajador debe cumplir para recibir como forma de
pago los respectivos efectos de comercio.”
“La infracción a esta prohibición será sancionada con la restitución obligatoria, por parte del
empleador, de la cifra descontada, debidamente reajustada, sin perjuicio de las multas que
procedan de conformidad a este Código.”
Descuentos obligatorios:
De acuerdo al nuevo inciso 1º del artículo 58 del Código del Trabajo, el empleador mantiene
la obligación de efectuar descuentos a las remuneraciones del trabajador por determinados
conceptos que precisa la ley y por su solo mandato. Ellos son:
Al respecto, es posible inferir que tratándose de los conceptos anotados, la nueva normativa
no introduce modificación alguna, manteniéndose inalterable, por ende, la obligación del
empleador de efectuar tales descuentos de las remuneraciones del trabajador por la sola
disposición de la ley, sin que se requiera la autorización de éste.
No obstante lo anterior, cabe precisar que la ley Nº 20.540, suprimió del inciso 1º del artículo
58 del Código, como descuentos obligatorios los referidos a cuotas correspondientes a
dividendos hipotecarios por adquisición de viviendas, y las cantidades que el trabajador
hubiere indicado para ser depositadas en cuentas de ahorro para la vivienda, abierta a su
nombre, en una institución financiera o en una cooperativa de vivienda, todos las cuales no
podían exceder del 30% de la remuneración.
Pues bien, estos descuentos, con distinta comprensión y alcance, han sido mantenidos, y,
aún más, ampliados a otras finalidades, como las educacionales, o a servir préstamos
concedidos por el empleador para los señalados propósitos, aún cuando ya con un carácter
facultativo para ambas partes:
La ley Nº 20.540 incorpora al inciso 2º del artículo 58 del Código, una nueva categoría de
descuentos de tal naturaleza, los cuales requieren acuerdo entre el empleador y el
trabajador, que debe constar por escrito y corresponder a los siguientes conceptos o
finalidades:
2.- Cantidades para depósito en cuentas de ahorro para la vivienda, cualquiera sea el
organismo receptor, los que podrían seguir siendo una institución financiera o una
cooperativa de vivienda, como lo disponía el artículo 58 en su inciso 1º, antes de la
modificación, u otros, que permita el logro del mismo objetivo;
b.- Sumas destinadas a la educación del trabajador, de su cónyuge o de alguno de sus hijos.
Estos descuentos, que constituyen una de las principales innovaciones de la norma legal
modificatoria, comprenden descuentos de las remuneraciones del trabajador de sumas
destinadas a la educación de las siguientes personas:
B.1.- Beneficiarios
3.- Uno de sus hijos, teniendo presente que el legislador utiliza la expresión en singular
“alguno”. Tal conclusión se corrobora con el análisis de la historia fidedigna de la ley Nº
20.540, en cuya discusión se cambió la redacción del proyecto primitivo que se refería a uno
o más hijos del trabajador, por la oración “alguno de sus hijos”, la que quedó plasmada en el
texto definitivo de dicho cuerpo legal.
Considerando que el texto de la ley se refiere a gastos educacionales sin efectuar distinción
alguna, posible es sostener que la nueva normativa resulta aplicable a cualquier nivel
educacional, esto es, básica, media o superior, conclusión que también se corrobora con la
historia fidedigna de la ley Nº 20.540, en la cual consta que en la etapa de discusión del
proyecto se eliminó la referencia a la educación superior a que se aludía inicialmente.
2. A.- Facultad al Empleador para otorgar mutuos, créditos o préstamos al trabajador para
fines específicos:
La nueva normativa contenida en el inciso 2º del artículo 58 del Código del Trabajo, faculta
además al empleador para otorgar los trabajadores mutuos o créditos sin interés, con las
siguientes finalidades:
2. B.- Formalidades
c.- Al no contemplar la ley plazos para los mutuos, créditos o préstamos, ni garantías,
deberán ser las mismas partes las que convengan tales aspectos.
Cabe señalar, que la doctrina uniforme y reiterada de este Servicio, manifestada, entre otros,
en dictámenes Nºs. 3516/113, de 28.08.2003, y 4681/206, de 20.08.1996, ha precisado que
los préstamos efectuados por el empleador al trabajador están sujetos al tope del 15% de la
remuneración del trabajador, como lo establecía el inciso 2º del artículo 58 del Código del
Trabajo, máximo actualmente modificado que deberá entenderse ampliado al 30% de la
remuneración cuando corresponda a créditos, mutuos o préstamos del empleador para los
fines específicos ya indicados, manteniéndose no obstante dicho tope de hasta un 15%
cuando se deba a préstamos del empleador efectuados con otras finalidades, como se trata
en el número siguiente.
3.- Descuentos facultativos del empleador y el trabajador previo acuerdo escrito, para
efectuar pagos de cualquier naturaleza:
Estos descuentos corresponden a los establecidos en el anterior inciso 2º del artículo 58 del
Código, que luego de la modificación de la ley Nº 20.540 pasó a ser inciso 3º, por lo que se
han mantenido, y se refieren a aquellos acordados entre el empleador y el trabajador para
efectuar pagos de cualquier naturaleza, cuyos requisitos son:
a.- Acuerdo entre empleador y trabajador que debe constar por escrito, y
b.- El descuento por tal concepto está sujeto a un tope máximo del 15% de la remuneración
total del trabajador.
4.- Descuentos prohibidos a las remuneraciones de los trabajadores por los conceptos
siguientes:
a.- Son los tratados en el actual inciso 5º del artículo 58, que correspondía al inciso 3º antes
de la modificación de la ley Nº 20.540, por arriendo de habitación, luz, entrega de agua, uso
de herramientas, entrega de medicinas, atención médica u otras prestaciones en especie, o
multas no autorizadas en el reglamento interno de la empresa.
b.- Los contemplados en el actual inciso 6º, que correspondía al inciso 4º, antes de la
modificación de la ley Nº 20.540, por no pago de efectos de comercio que el
c.- Los considerados en el actual inciso 8º, anterior inciso 6º, por concepto de robo, hurto,
pérdida o destrucción por parte de terceros de bienes de la empresa, sin que haya mediado
responsabilidad del trabajador, los que en caso de efectuarse serán sancionados con la
restitución del descuento al trabajador, en montos reajustado, sin perjuicio de la multa
administrativa que proceda aplicar de acuerdo al Código del Trabajo.
5.- Tope máximo de los descuentos que puede hacer el empleador de la remuneración del
trabajador, cualquiera sea el fundamento de los mismos como resultado de los acuerdos a
que puedan llegar al respecto.
El nuevo inciso cuarto, que la ley en análisis introduce al artículo 58 del Código del Trabajo,
incorpora un tope máximo para efectuar descuentos sobre las remuneraciones del
trabajador, cualquiera sea el fundamento de los descuentos convencionales o facultativos,
entre los cuales se encuentran los acordados con el trabajador para adquisición de vivienda,
o para ser depositados en cuentas de ahorro para la vivienda, para la educación del
trabajador y de los demás beneficiarios, para descontar los mutuos, créditos o préstamos
concedidos por el empleador para los mismos fines, y descuentos para efectuar pagos de
cualquier naturaleza, todos los cuales en conjunto no podrán exceder del 45 % de la
remuneración total del trabajador.
De esta forma, de acuerdo a este tope máximo de descuentos, se deriva que habrá que
determinar en cada caso en primer término el monto de los descuentos que afecten la
remuneración total del trabajador, para luego establecer el saldo o margen de porcentaje
de descuentos que proceda pactar por los restantes descuentos facultativos convenidos
con el trabajador, ya señalados en el presente dictamen, de modo tal, que en su conjunto,
no se exceda el 45% de la remuneración total de éste.
Saluda a Ud.
3) Por regla general, la relación laboral implica obligaciones recíprocas para las partes
mientras el contrato de trabajo se encuentra vigente, sin perjuicio de lo precisado en este
dictamen en cuanto a contrato de mandato suscrito entre las mismas partes.
5) Los descuentos sobre remuneraciones para hacer pagos a un banco por préstamo de
reprogramación de deudas no hipotecarias de vivienda concedido al trabajador, se
encontrarían afectos al tope del 15% de la remuneración total, ya sea que se materialicen
durante la vigencia del contrato o a su término.
8) En general, las indemnizaciones que corresponda pagar con motivo del término del
contrato de trabajo, no quedarían afectas a las normas de inembargabilidad del artículo 57
del Código del Trabajo, por lo que serían embargables sin restricciones de tope legal.
9) La Dirección del Trabajo carece de competencia legal para pronunciarse sobre calificación
de causales de término de contrato.
FUENTES: Código del Trabajo, arts. 5º, inciso 2º; 41, inciso 2º; 52; 57, inciso 1º; 58; 71,
inciso 1º; y 73, inciso 3º .
CONCORDANCIA: Dictámenes Ords. Nºs 4799/337, de 09.10.98; 4359/237, de 24.07.97;
6256/290, de 26.10.94; y 7067/234, de 28.10.91;
“Por el presente instrumento y considerando mi calidad de deudor del BBVA Banco BHIF, por
un crédito de un capital inicial de $.., otorgo a mi empleador Empresa El Mercurio S.A.P.,
mandato mercantil, especial e irrevocable para que en el evento que por cualquier causa se
pusiere término a mi relación con Empresa El Mercurio S.A.P., faculto expresamente a mi
empleador, otorgándole al efecto un mandato mercantil, especial e irrevocable, para que
deduzca del monto de mi eventual indemnización por años de servicios o de otras sumas a
las que pudiere tener derecho al término de mi relación laboral, todas las cantidades que
sean necesarias para prepagar totalmente el préstamo adeudado a BBVA Banco BHIF..”.
Del texto antes transcrito se deriva que el trabajador otorga mandato irrevocable a la
empresa empleadora, para que al término del contrato le descuente de la indemnización por
años de servicio, como de cualquier otra suma que le corresponda, lo necesario para
prepagar el préstamo que el Banco le ha otorgado.
De esta manera, atendido el tenor del mandato, el trabajador estaría disponiendo por
anticipado del derecho a percibir, cuando concluya su contrato de trabajo, la indemnización
por años de servicio, y cualquiera otra suma que deba pagársele en tal oportunidad, si los
importes que le corresponderían por tales conceptos podrán ser descontados por la
empleadora y enterados al Banco acreedor.
Al efecto, el artículo 5º, inciso 2º, del Código del Trabajo, dispone:
“Los derechos establecidos por las leyes laborales son irrenunciables, mientras subsista el
contrato de trabajo“.
De este modo, terminado el contrato de trabajo, no habría impedimento legal laboral para
que el trabajador otorgara mandato o efectuare las operaciones bancarias que estimare
necesarias que llevaren a prepagar el préstamo otorgado por el banco, aplicando lo que le
correspondiera percibir con motivo del término del contrato de trabajo y finiquito.
Con todo, acorde a la doctrina de este Servicio, cabe precisar que si se trata del pago de
remuneraciones en el finiquito, y ellas van a quedar afectas a descuentos al término del
contrato, estos deben hacerse con sujeción a lo establecido en el artículo 58 del Código del
Trabajo, que en este caso, en su inciso 2º, dispone que no podrán exceder del 15% de la
remuneración total del trabajador y previo acuerdo escrito con el empleador, cuando se trata
de realizar pagos de cualquier naturaleza, como ocurriría en la especie en favor del banco, si
no se refiere a los descuentos obligatorios del inciso 1º, ni a los prohibidos del inciso 3º del
mismo artículo 58.
En el caso en análisis, atendido el tenor del mandato, habría que aclarar que no se trataría
que la empleadora obligue al trabajador a cumplir un acuerdo si éste ya no labora para ella,
sino al contrario, habría sido precisamente el trabajador el que con la suscripción del
mandato estaría exigiendo a la empleadora mandataria efectuar descuentos de su finiquito,
y enterarlos en el banco, una vez concluido el contrato de trabajo, sin perjuicio de la objeción
formulada al respecto.
Cabe agregar, por otro lado, que en la especie, entre el trabajador y la empleadora se
producirían efectos jurídicos más allá de la terminación de la relación laboral que vincula a
ambos por obra de un contrato ajeno al contrato de trabajo, cual sería un contrato civil de
mandato, que se rige por normas propias, contenidas en los artículos 2116 y siguientes del
Código Civil, pero no por el Código del Trabajo, que rige a las partes mientras están vigentes
el contrato de trabajo o sus efectos propios. De este modo, desde este punto de vista, el
contrato de mandato podría producir efectos más allá de la terminación del contrato de
trabajo, si se trata de relaciones jurídicas contractuales distintas, sin perjuicio de lo informado
acerca de la validez de una renuncia anticipada de derechos laborales a través de tal
instrumento.
Si para efectos legales, prevalece el mandato del trabajador a la empleadora para descuento
de las indemnizaciones, o el convenio entre trabajador y el banco acreedor sobre el pago de
deudas.
En cuanto a la validez del convenio con el banco sobre pago de deudas del trabajador,
atendida la naturaleza de este acto jurídico, de carácter civil o comercial, no compete a esta
Dirección pronunciarse, por ser ajeno a sus facultades legales.
El artículo 58 del Código del Trabajo, en su inciso 1º, trata los descuentos que el empleador
está obligado a efectuar de las remuneraciones de los trabajadores, como los impuestos, las
cotizaciones previsionales, las cuotas sindicales, los dividendos hipotecarios para adquisición
de viviendas, etc. A su vez, el inciso 3º del mismo artículo, se refiere a los descuentos que le
está prohibido efectuar como por arriendo de habitación, luz, entrega de agua, etc.
Finalmente, el inciso 2º del artículo indicado, dispone:
“Sólo con acuerdo del empleador y del trabajador que deberá constar por escrito, podrán
deducirse de las remuneraciones sumas o porcentajes determinados, destinados a efectuar
pagos de cualquier naturaleza. Con todo, las deducciones a que se refiere este inciso, no
podrán exceder del quince por ciento de la remuneración total del trabajador”.
Por consiguiente, atendido lo expuesto y la disposición legal citada, es posible afirmar que,
los descuentos de que se trata, que no serían para pagar dividendos hipotecarios de
adquisición de vivienda, sino para pagar al banco reprogramación de otras deudas del
trabajador, no son de los descuentos obligatorios del inciso 1º del artículo 58, ni los
prohibidos del inciso 3º del mismo artículo, por lo que solo cabría concluir que
corresponderían a los descuentos permitidos, del inciso 2º, para efectuar pagos de cualquier
naturaleza, en cuyo caso estarían afectos a tope del 15 % de la remuneración total.
En nada podría alterar la conclusión anterior en cuanto a tope de descuento el hecho que el
contrato hubiere terminado al momento de hacerse efectivos los descuentos en el finiquito
del trabajador, si como lo ha sostenido la doctrina de esta Dirección, entre otros, en dictamen
Ord. Nº 6256/290, de 26.10.94, el citado artículo 58, inserto en el capítulo del Código del
Trabajo que tiene por fin proteger las remuneraciones de los trabajadores, no hace distingo
alguno en el sentido de que para que la disposición legal opere y produzca todos sus
efectos, el contrato de trabajo debe encontrarse vigente al percibir el trabajador la
remuneración, sino que, por el contrario, atiende a la sola existencia de estipendios que
revistan el carácter de remuneración, devengada durante la vigencia del contrato de trabajo.
De esta manera, los descuentos sobre remuneraciones para hacer pagos al banco por
préstamo concedido al trabajador, que no sea para pagar dividendos hipotecarios de
adquisición de viviendas, se encontrarían afectos al tope del 15%, ya sea que se materialicen
durante la vigencia del contrato o a su término, en el finiquito.
De la disposición legal citada es posible inferir que durante el feriado anual el trabajador
debe percibir remuneración íntegra, lo que lleva a concluir que el pago efectuado por tal
concepto es jurídicamente remuneración, por propia indicación de la ley.
Por otra parte, el inciso 3º, del artículo 73 del Código del Trabajo, señala:
“Con todo, el trabajador cuyo contrato termine antes de completar el año de servicio que da
derecho a feriado, percibirá una indemnización por ese beneficio, equivalente a la
remuneración integra calculada en forma proporcional al tiempo que medie entre su
contratación o la fecha en que enteró la última anualidad y el término de sus funciones”
De la disposición antes citada se desprende, en lo que interesa, que el pago que se efectúa
por concepto de dicho feriado proporcional es jurídicamente indemnización y no
remuneración, de acuerdo al expreso tratamiento que le da el legislador.
Aclarado lo anterior, y a fin de poder responder la consulta, el inciso 1º del artículo 57 del
Código del Trabajo, dispone:
De la norma legal citada se deriva que las remuneraciones y las cotizaciones previsionales
son inembargables, salvo las primeras, en lo que excedan de 56 unidades de fomento, que
serán embargables, como ocurre con las excepciones legales que la norma contempla en su
inciso 2º.
Pues bien, como ha quedado precisado con anterioridad, que lo que se paga durante el
período de feriado legal es remuneración, y es indemnización el pago por feriado
proporcional, sólo cabe concluir al tenor de la consulta que el pago que se hace durante el
feriado es inembargable, hasta el monto señalado en la ley, salvo las excepciones legales, y
a su vez, el pago por feriado proporcional, es embargable, cualquiera sea su monto, si no
constituye jurídicamente remuneración, que es lo que el legislador protege con la
inembargabilidad.
De la disposición anterior se desprende que la terminación del contrato de trabajo antes del
año de servicio da derecho a pago de gratificación en proporción a los meses transcurridos.
Ahora bien, el artículo 42, letra e) del Código del Trabajo, señala que “constituyen
remuneración, entre otras”: “la gratificación, que corresponde a la parte de las utilidades con
que el empleador beneficia el sueldo del trabajador”.
Precisado lo anterior, acorde a lo dispuesto en el artículo 57, inciso 1º, primera parte, del
Código del Trabajo, en orden a que “Las remuneraciones de los trabajadores y las
cotizaciones de seguridad social serán inembargables” forzoso resulta convenir que si la
gratificación proporcional es remuneración le resultaría aplicable la norma legal que
establece la inembargabilidad de las remuneraciones y las cotizaciones previsionales.
Como ha quedado dicho en respuestas anteriores, al analizar el artículo 57 del Código del
Trabajo, sólo las remuneraciones tienen la calidad de inembargables, hasta 56 unidades de
fomento, salvo las excepciones que contempla la misma norma, por lo que las
indemnizaciones que procede pagar con motivo del término del contrato, como no
constituyen jurídicamente remuneración, no le resultan aplicables las normas legales de
protección de pago de las remuneraciones, como el artículo 57 del Código, que como se ha
Por regla general la relación laboral implica obligaciones recíprocas para las partes mientras
el contrato de trabajo se encuentra vigente, sin perjuicio de lo precisado en este dictamen en
cuanto a contrato de mandato suscrito entre las mismas partes.
5) Los descuentos sobre remuneraciones para hacer pagos a un banco por préstamo de
reprogramación de deudas no hipotecarias de vivienda concedido al trabajador, se
encontrarían afectos al tope del 15% de la remuneración total, ya sea que se materialicen
durante la vigencia del contrato o a su término.
8) En general, las indemnizaciones que corresponda pagar con motivo del término del
contrato de trabajo no quedarían afectas a las normas de inembargabilidad del artículo 57
del Código del Trabajo, por lo que serían embargables sin restricciones de tope legal.
9) La Dirección del Trabajo carece de competencia legal para pronunciarse sobre calificación
de causales de término de contrato.
Saluda a Ud.,
RDIC.: 1) El trabajador que al término de la relación laboral mantenga vigente crédito social con una
Caja de Compensación de Asignación Familiar, deberá al momento de ratificar el finiquito, autorizar
expresamente cualquier descuento destinado al pago de tales obligaciones crediticias.
2) Reconsidera y deja sin efecto Dictamen Nº4185/071, de 23.09.2010 relativo a créditos otorgados
por Cajas de Compensación y Asignación Familiar.
FUENTES: Artículos 54 bis, 172 y 177 del Código del Trabajo, Ley Nº18.833.
SANTIAGO, 07.08.2014
Por necesidades del Servicio, se ha estimado pertinente reconsiderar la doctrina vigente respecto a la
forma y oportunidad en que el trabajador, podría válidamente autorizar el descuento de dinero sobre
las indemnizaciones a que hubieran lugar al término de la relación laboral, con el propósito de pagar
un crédito otorgado por una Caja de Compensación de Asignación Familiar.
Sobre el particular, cabe considerar que mediante Dictamen Nº4185/071 de 23.09.2010, este Servicio
modificó la doctrina institucional vigente sobre la materia hasta esa fecha. Teniendo como base un
pronunciamiento de la Superintendencia de Seguridad Social se concluyó que no correspondería
exigir al trabajador al momento de ratificar un finiquito, que reitere su voluntad de aceptar descuentos
por saldos de crédito social otorgado por alguna Caja de Compensación de Asignación Familiar,
puesto que tal voluntad se encontraría manifestada por medio de un mandato irrevocable otorgado en
favor de tales instituciones.
Ahora bien, por parte de esta Dirección se ha estimado necesario revisar el citado pronunciamiento,
conforme a los principios y disposiciones que seguidamente se exponen:
Si bien el artículo 3º de la ley Nº18.833, que contiene el Estatuto General de las Cajas de
Compensación de Asignación Familiar, entrega la supervigilancia y fiscalización de las mencionadas
instituciones, y de toda la reglamentación que establezcan para la administración de las prestaciones
que otorgan, a la Superintendencia de Seguridad Social, tales atribuciones no limitan el ejercicio de
las facultades que el ordenamiento jurídico reconoce al Director del Trabajo, sobretodo en lo
concerniente a la interpretación de la legislación laboral, criterio además compartido por la
Superintendencia de Seguridad Social, organismo que mediante Ordinario Nº49.523 de 31.07.2014
manifestó su opinión sobre la materia en análisis.
Por lo anterior, teniendo en cuenta que las circunstancias relativas a descuentos que afectan a
remuneraciones y otros estipendios tales como indemnizaciones por término de contrato de trabajo,
inciden sobre obligaciones derivadas de la relación laboral, esta Dirección resulta competente para
fijar el sentido y alcance de las normas y principios laborales que las regulan.
2.- En cuanto a la supremacía de los principios y normativa laboral sobre la libertad contractual civil.
Cabe considerar que tanto los fundamentos del Dictamen que se reconsidera en este acto, como
también los razonamientos expresados en algunas sentencias de los tribunales superiores de justicia
Sin embargo, en concepto de esta Dirección la exacta y exclusiva observancia de la reglas generales
referentes a los actos y declaraciones de voluntad contenidos en la legislación civil, destinada al
propósito de consagrar la eficacia del mandato o autorización concedida por el trabajador en favor de
la Caja de Compensación de Asignación Familiar, conlleva desatender la naturaleza, fines y objetivos
de la legislación laboral.
En materia laboral, conforme al carácter protector de estas normas, se reconoce la supremacía de los
principios destinados al restablecimiento del desequilibrio natural, que nace de la disparidad de poder
socioeconómico existente entre el trabajador y su empleador, derivada del dominio sobre los bienes
de capital ejercido por este último.
Conforme resulta analizado por la doctrina nacional (Gamonal; 2011: 17), el Derecho Laboral es de
orden público tanto por tutelar el interés general de la sociedad como por la irrenunciabilidad de sus
derechos.
“Los derechos establecidos por las leyes laborales son irrenunciables, mientras subsista el contrato
de trabajo”.
En tal sentido, la doctrina reiterada y uniforme de este Servicio, respecto de la disposición legal antes
citada, que hace explícito el principio de irrenunciabilidad de los derechos laborales, manifiesta, que
no procede jurídicamente pactar descuentos de las remuneraciones si se hace con infracción de las
normas laborales vigentes, o contra valores del finiquito estando vigente el contrato de trabajo si ello
implica renuncia anticipada de derechos (doctrina contenida, entre otros, en dictámenes Nº 3.902/147,
de 22.09.2003 y Nº4.359/237, de 24.07.1997).
3.- Los efectos del contrato de mandato o pacto de descuento de sumas para el pago de crédito
social, ante el orden público laboral.
Thayer y Novoa (2010), citando a W. Däubler, mencionan que quien pierde su puesto de trabajo,
pierde más que una relación contractual, de la noche a la mañana el presupuesto familiar queda
mermado, las vitrinas representan para él la imagen de un mundo resplandeciente del que no puede
disfrutar.
Dicha constatación, lleva a concluir que, el objetivo de las indemnizaciones por término de contrato
consagradas en la ley, no es otro que garantizar la subsistencia de quien ha sido privado de su fuente
de ingresos, enfrentándose a un futuro financiero incierto para él y su familia.
Conforme a los fines perseguidos por el legislador al fijar las indemnizaciones por término del contrato
de trabajo, cabe entender que tales disposiciones resultan esenciales para el orden público laboral,
entendido éste como una limitación de la autonomía de la voluntad individual, dispuesta por la ley,
con miras al interés general.
Entonces, se advierte por una parte que todo pacto que conlleve la renuncia de los derechos
establecidos en la leyes laborales, adoptado durante la vigencia de la relación laboral, implica una
acción prohibida por la ley, por lo que al tenor del artículo 10 del Código Civil tal acuerdo sería nulo y
de ningún valor.
Por otra parte, al tenor de lo dispuesto en el artículo 2149 del Código Civil, el otorgamiento de todo
mandato lleva implícito el deber de abstenerse de ejecutar el encargo en el caso que tal acción pueda
involucrar consecuencias perniciosas para el mandante, tal como podría acontecer al materializar un
descuento de sumas de dinero sobre las indemnizaciones por término de contrato de trabajo. Sobre
este punto se ha sostenido que “el mandatario no es un simple asalariado que debe cumplir las
órdenes de su patrón sin discriminar si conviene o no a éste lo que está haciendo <…> por el
contrario, el mandatario reemplaza al mandante, lo sustituye y debe velar por los intereses de éste
como un buen padre de familia vela por los suyos propios” (Stitchkin; 2008: 398).
Atendido que conforme a la ley Nº18.833, el pago y cobro de crédito social otorgado por una Caja de
Compensación de Asignación Familiar se rige por las mismas normas que las cotizaciones
previsionales, forzoso resulta entender que tales descuentos se encuentran comprendidos en el
inciso 1º del artículo 58 del Código del Trabajo, por lo que revisten el carácter de obligatorios, ergo,
no exigen acuerdo previo entre el trabajador y el empleador, y no tienen un tope legal máximo de la
remuneración mensual.
Sin embargo, cabe precisar que atendido el claro tenor del artículo 22 de la Ley Nº 18.833, el
descuento para servir al pago de un crédito social, sólo puede recaer en los rubros que constituyen
remuneración, y no sobre aquellos que el legislador ha establecido con carácter de indemnización,
conclusión también adoptada por los tribunales especializados en lo laboral (V.Gr. 2º JLT Santiago;
Rit: O-1989-2013; Cons. Décimo Tercero).
5.- Conclusión.
La renuncia a los derechos establecidos en la legislación laboral, conforme a los principios que
inspiran el orden público laboral, solo resulta procedente y oportuna una vez que el vínculo laboral ha
terminado.
Los descuentos autorizados por la ley para servir al pago de un crédito social, corresponden
exclusivamente a aquellos que se ejercen sobre la remuneración mensual del trabajador, por lo que
cualquier otra forma de descuento deberá ser expresamente autorizada por él.
MATERIA= Indemnización legal por años de servicio Base cálculo Remuneración variable.
RESUMEN DE DICTAMEN= Por la expresión tres últimos meses calendario a que alude la
ley para los efectos del cálculo de la indemnización por término de contrato de los
dependientes afectos a remuneraciones variables, debe entenderse los tres meses con
denominación específica en que se hubiere percibido remuneración completa y que
anteceden al de la conclusión de la relación laboral, de suerte que si en alguno de ellos el
dependiente no hubiere generado remuneración por haber hecho uso de permiso éste
deberá excluirse y considerarse sólo aquellos tres que precedan inmediatamente al mes en
que se hizo efectivo el referido beneficio.
DICTAMEN=
Para los efectos del pago de las indemnizaciones a que refieren los artículos 168, 169, 170
y 171, la última remuneración mensual comprenderá toda cantidad que estuviere
percibiendo el trabajador por la prestación de sus servicios al momento de terminar el
contrato, incluidas las imposiciones y cotizaciones de seguridad social de cargo del
trabajador y las regalías o especies avaluadas en dinero, con exclusión de la asignación
familiar legal, pagos por sobretiempo y beneficios o asignaciones que se otorguen en forma
esporádica o por una sola vez al año, tales como gratificaciones y aguinaldos de navidad.
Del precepto legal precedentemente transcrito fluye que el legislador ha precisado como
base de cálculo para el pago de las indemnizaciones que proceden por la terminación del
contrato de trabajo la última remuneración mensual , la que por expresa disposición de la ley
comprenderá toda cantidad que la ley estuviere percibiendo el trabajador por la prestación de
sus servicios, con las exclusiones que en la misma disposición legal se indican.
Cabe señalar que sobre la base del análisis del mencionado precepto legal este Servicio,
entre otros, en dictámenes Nºs. 8393, de 23.12.91 y 5.766-188, de 27.08.91 ha precisado
que para los efectos indicados debe considerarse un período básico mensual de
remuneración, esto es, aquel que dura un mes, agregando que en consecuencia aquel mes
en el cual no se percibió remuneración por toda su extensión o duración no corresponde
que se entienda comprendido en el período básico que precisa el legislador.
Los mismos pronunciamientos jurídicos, resolviendo sobre que debe entenderse por las
expresiones tres últimos meses calendario utilizadas por el legislador, tratándose de
trabajadores afectos a remuneraciones variables que en uno o más de dichos meses han
hecho uso de licencia médica con derecho a subsidio, han sostenido que dicho período es
aquel que se encuentre cubierto en forma completa por la correspondiente remuneración, de
suerte tal, que si en algún mes se ha percibido parte remuneración y en parte subsidio por
incapacidad laboral deberá descartarse esa mensualidad para dicho cómputo, procediendo
considerar sólo los meses inmediatamente anteriores a aquél en que el trabajador obtuvo
subsidio, toda vez que éste es un beneficio previsional de naturaleza distinta a la
remuneración .
Ahora bien, con el objeto de resolver la consulta planteada se hace necesario determinar si la
citada doctrina resulta aplicable en la especie, esto es, en el caso de permisos sin goce de
remuneración que se hubieren hecho efectivos en uno o más de los meses que comprende
el período en análisis.
Al respecto, es necesario señalar previamente, que nuestra legislación laboral no regula los
permisos otorgados convencionalmente por un empleador a un trabajador, sean éstos con o
sin derecho a percibir remuneración.
Saluda a Ud.,