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ENSAYO SOBRE EL MAL HÁBITO DE FUMAR:

CONSUMO Y CONSECUENCIAS

I.- INTRODUCCIÓN.

El cigarrillo es un producto del tabaco en forma de tubo que se fabrica con hojas
de tabaco curadas, cortadas finamente, enrolladas y envueltas en un papel
delgado. También puede tener otros ingredientes, como sustancias para añadirle
diferentes sabores. Un cigarrillo se enciende en un extremo y se fuma y, por lo
general, se inhala hacia los pulmones. Los cigarrillos contienen nicotina y muchos
productos químicos que causan cáncer y que son perjudiciales tanto para los
fumadores como para quienes no fuman. Fumar cigarrillos puede producir adicción
a la nicotina y causar muchos tipos de cáncer, como cánceres de pulmón, laringe,
boca, esófago, garganta, riñón, vejiga, páncreas, estómago y cuello uterino, así
como leucemia mieloide aguda. Fumar cigarros también causa otros problemas de
salud, como cardiopatías, derrames cerebrales y enfermedades pulmonares, como
enfisema y bronquitis crónica.

Durante el presente ensayo que busca concientizar sobre el mal habito del cigarro
en la Escuela de Comando y Estado Mayor veremos el Cigarrillo y la poderosa
Industria del Cigarrillo, como se crea el mal hábito del cigarrillo, las consecuencias
negativas de fumar, las leyes contra el hábito del cigarro y las condiciones de su
consumo en Bolivia, el consumo y el ejemplo que se les da a los subordinados
dentro del Ejército de Bolivia.

En la Escuela de Comando donde se forman los futuros conductores, si bien ha


disminuido su consumo, se ha delimitado su consumo en un área reservada solo
para fumadores, sin embargo, no condice con la condición de futuros conductores
de las unidades y de los jóvenes que van a conducir y van a cumplir su servicio
militar.

Finalmente llegaremos a conclusiones para determinar los beneficios o no del


consumo de tabaco a nivel individual y dentro de nuestra Institución y su impacto
en la eficiencia de las diferentes Unidades.

II.- DESARROLLO.

A.- El Cigarrillo y la Industria del Cigarrillo .

La industria tabacalera es aquella cuyo objetivo es la producción y venta de


cigarrillos. Aunque el consumo de tabaco está disminuyendo en muchas
partes del mundo, las compañías tabacaleras igualmente vendieron
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aproximadamente 5,2 billones de cigarrillos en 2021. Algunas de las
principales empresas tabacaleras afirman que quieren dejar de vender
cigarrillos, pero el análisis de sus reuniones de accionistas y otras
actividades comerciales sugiere que los cigarrillos siguen siendo su producto
estrella y que seguirán siéndolo si no se realizan intervenciones políticas.

La industria también gana dinero con otros productos de tabaco adictivos.


Los cigarrillos artesanales liados a mano que contienen más nicotina,
alquitrán y monóxido de carbono que otros cigarrillos. Se fabrican
principalmente en la India con una mano de obra de la que hasta el 25 % son
niños. El cigarrillo pequeño o para masticar, es otro producto de tabaco
adictivo, que se vende como tabaco suelto o en bolsitas que se colocan entre
la encía y el labio superior.

Los productos de tabaco calentado (HTP, por sus siglas en inglés) son el
nuevo producto de tabaco de la industria. Son dispositivos electrónicos que
pretenden calentar el tabaco en lugar de quemarlo, se comercializan como
los llamados “productos de riesgo reducido” a pesar de que todavía se
desconocen los efectos a largo plazo sobre la salud de estos productos de
tabaco adictivos.

La industria tabacalera también vende productos adictivos de nicotina que no


contienen tabaco, incluidos los cigarrillos electrónicos y también bolsitas de
nicotina. Investigaciones recientes han revelado pruebas preocupantes de
que la industria está tratando de crear adicción entre los jóvenes a estos
nuevos productos de nicotina y tabaco, presentándolos como productos de
alta tecnología y con un estilo de vida sofisticado.

B.- El hábito del cigarrillo.

La mayoría de los fumadores comenzaron el hábito cuando eran


adolescentes. Quienes tienen amigos y/o tienen padres que fumen son más
propensos a comenzar a fumar que las personas que no están rodeados de
fumadores. Algunos adolescentes indican que “sólo querían probar”, o que
fumar les parecía “cool”, “en onda” o “súper”.
Los anuncios de la industria tabacalera, las ofertas especiales y otras
actividades de promoción de sus productos son una gran influencia en
nuestra sociedad. La industria tabacalera gasta miles de millones de dólares
cada año en la creación y mercadeo de anuncios que presentan el acto de
fumar como algo emocionante, glamuroso y no peligroso. El consumo de
tabaco también se muestra en juegos de video, en Internet, y en la televisión.
Además, las películas que muestran fumadores son otra gran influencia. Los

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estudios demuestran que los jóvenes que ven a los actores fumando en las
películas tienen una probabilidad mayor de comenzar a fumar.

Una influencia más reciente en el uso del tabaco es el cigarrillo electrónico y


otros dispositivos electrónicos de alta tecnología para vaporear que están
muy de moda. A menudo son vistos como inofensivos y más fáciles de
conseguir y usar que los productos del tabaco tradicional. Estos dispositivos
representan para los nuevos usuarios una gran manera de aprender a inhalar
e iniciarse como adictos a la nicotina, lo que los puede preparar para
convertirse en fumadores.

Cualquier persona que comienza a usar tabaco puede hacerse adicto a la


nicotina. Los estudios han comprobado que las personas que empiezan a
fumar durante la adolescencia son más propensas a formar un hábito.
Mientras más joven comienza a fumar, más probabilidades hay de
convertirse en un adicto a la nicotina.

Según investigaciones en los Estados Unidos, casi 9 de cada 10 fumadores


adultos comenzaron el hábito antes de los 18 años, y casi todos empezaron
a fumar a los 26 años. El informe calcula que aproximadamente 3 de 4
fumadores de la Escuela Secundaria se convertirán en fumadores adultos
(incluso si intentan dejar de fumar en unos pocos años).

C.- Consecuencias negativas de fumar.

El humo de tabaco contiene muchas sustancias químicas que son dañinas


tanto para los fumadores como para quienes no fuman. Respirar solo un
poco de humo de tabaco puede ser perjudicial. De las más de 7000
sustancias químicas presentes en el humo de tabaco, al menos 250 se sabe
que son dañinas, incluso el cianuro de hidrógeno, el monóxido de carbono y
el amoníaco, de esas 250 sustancias conocidas como dañinas en el humo de
tabaco, al menos 69 pueden causar cáncer.

Fumar es la causa principal de muerte prematura, y que puede prevenirse,


en este país. Fumar cigarrillos y la exposición al humo de tabaco causa cerca
de 480.000 muertes prematuras cada año. Los índices de mortalidad entre
los fumadores son casi tres veces más altos que en las personas que no han
fumado nunca. El fumar daña casi cada órgano del cuerpo y sistema de
órganos del cuerpo y disminuye la salud general de la persona. Fumar causa
cánceres de pulmón, de esófago, de laringe, boca, garganta, riñón, vejiga,
hígado, páncreas, estómago, cérvix o cuello uterino, colon y recto, así como
también leucemia mieloide aguda.

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Desde la década de los sesenta, el riesgo de un fumador de presentar
cáncer de pulmón o enfermedad pulmonar obstructiva crónica ha aumentado
en comparación con quienes no fuman, aun cuando el número de cigarrillos
consumidos por cada fumador ha disminuido. Ha habido también cambios
con el tiempo en el tipo de cáncer de pulmón que se presenta en los
fumadores, disminución de carcinomas de células escamosas pero un
aumento dramático de adenocarcinomas. Estas dos desviaciones pueden
deberse a los cambios en diseño y composición de los cigarrillos, en la forma
como se curan las hojas de tabaco y en la profundidad con la que los
fumadores inhalan el humo de los cigarrillos y los productos tóxicos que
contienen.

Cuanto más tiempo fuma una persona, mayor será su probabilidad de que
experimente daños por fumar, incluso de muerte más temprana. Pero, sin
importar su edad, quienes fuman pueden reducir sustancialmente su riesgo
de enfermedades, incluso de cáncer, al dejar de fumar.

D.- Leyes en Bolivia.

El 13 de febrero de 2020 se promulgó la Ley N°1280, en la cámara de


senadores de la Asamblea Legislativa Plurinacional que busca establecer el
marco normativo sobre las medidas que permitan proteger a la persona, la
familia y la comunidad, contra las consecuencias sanitarias, sociales,
ambientales y económicas del consumo de tabaco y de la exposición al
humo de tabaco con la finalidad de precautelar el derecho a la salud de las
generaciones presentes y futuras de las bolivianas y los bolivianos,
protegiéndolas de las consecuencias sanitarias, sociales, ambientales y
económicas causadas por el consumo de productos de tabaco y la
exposición al humo de tabaco.

La nueva ley establece que todos los espacios cerrados de acceso público y
lugares de trabajo deben ser 100% libres de humo de tabaco, sin
excepciones, protegiendo a toda la población de los riesgos de la exposición
al humo de segunda mano. La ley también exige advertencias sanitarias
gráficas que cubran el 60% de los paquetes de cigarrillos, tanto en la parte
delantera como en la trasera, y establece algunas restricciones a la
publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, protegiendo a los niños y niñas
de la comercialización de los productos de tabaco.

Con la aprobación de esta ley de control de tabaco en Bolivia, casi toda


Sudamérica será libre de humo de tabaco. Con la excepción de Paraguay,

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todos los países del continente han prohibido fumar en lugares públicos,
protegiendo a más de 400 millones de personas del peligro del humo de
segunda mano.

El tabaquismo es una epidemia mundial con graves consecuencias


sanitarias, sociales y económicas. En Bolivia, el 21,9% de los hombres y
alrededor del 9% de las mujeres consumen tabaco diariamente. Más aún,
46.6% de las personas jóvenes están expuestas al humo de tabaco ajeno y
cada año, más de 4.600 bolivianos y bolivianas mueren por enfermedades
relacionadas al consumo de tabaco.

III.- CONCLUSIONES.

A.- Como militares debemos asociar la cultura y profesión militar a una vida sana
libre de excesos y vicios como el alcoholismo, el tabaquismo, y por
consiguiente, crear dentro el Ejército hábitos saludables como el comer bien
y el hacer deporte.

B.- Si bien existen todavía en las unidades “áreas de fumadores” la Ley 1280
prohíbe habilitar espacios para fumar en los lugares e instituciones públicos,
por lo tanto, esta norma debe ser considerada y es nuestra obligación
asesorar al mando superior para su cumplimiento.

C.- Como futuros conductores de pequeñas y grandes unidades debemos dar el


ejemplo a nuestros subordinados y no fumar, ni promover el vicio del
cigarrillo en nuestros instructores y mucho menos en nuestra juventud que
presta el servicio militar.

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