La interpretación de las culturas, GEDISA SA, Barcelona, 1989.
Titulo original en inglés
The Interpretation of Cultures by Basic Books, In. Nueva York,
1973
Traducción: Alberto L. Bixio
Revisión técnica: Carlos Julio Reynoso
Deudodécima reimpresión: setiembre 2003, Barcelona
En el cap. II de la obra “Descripción densa: hacia una
teoría interpretativa de la cultura” (1973), el antropólogo norteamericano Clifford Geertz1 propone ensayar en debate sobre planteamientos predominantes en el horizonte de la antropología científica del momento.
Expone desacuerdos básicos con respecto a la teoría
tradicional y a la concepción Iluminista de la cultura.
En primer lugar su planteo crítico responde al orden
metodológico, a las construcciones conceptuales potenciales según las concepciones científicas provenientes del positivismo. Tales, describen al hombre como un ser universal inmutable. El segundo planteo crítico parte del ámbito de la Ilustración, tal concepción concibió al hombre como… “una unidad con la naturaleza con la cual compartía una general unidad de composición ”…2 Estas explicaciones significaron en el campo de la investigación de la antropología un flujo de crecientes polémicas, al intentar subsumir los muy diferentes comportamientos individuales de los grupos humanos a principios racionales, para otorgarles una explicación o un sentido. Considerar a la naturaleza humana bajo semejante posibilidad consiste en negar toda contingencia espacial y toda temporalidad…”Precisamente fue lo que condujo al nacimiento del concepto del hombre como ser uniforme. Cualesquiera sean las cosas que afirme la moderna antropología- y parece que en un momento u otro afirmó todas las cosas posibles- hoy es firme la convicción de que los hombres no modificados por las costumbres de determinados lugares no existen, nunca existieron y, lo que es más importante 3 que no podrán existir por la naturaleza misma del caso ”
Apreciaciones que provocan en Geertz cuestiones
medulares como: ¿dónde está la línea entre lo natural, universal y constante en el hombre? Y ¿lo que es convencional, local y variable? La antropología debería según el autor orientarse por un concepto más viable que diera cuenta tanto de la diversidad como a la unidad de la naturaleza humana. Ante tal encrucijada han surgido varias alternativas, no obstante, evaluadas como insatisfactorias según el propio Geertz.
Arguye Geertz que esta manera de analizar la relación
naturaleza humana- cultura como poco sostenible, porque vacían de contenido los aspectos universales y no se llega a demostrar la relación en calidad precisa y congruente de los procesos culturales con los subyacentes procesos biológicos, psíquicos y sociales. Tal técnica supone hechos procedentes de diferentes niveles unos junto a otros…”Para suscitar la oscura sensación de que existe entre ellos alguna clase de relación, una oscura especie de corte”… 4
“La idea de que a menos un fenómeno cultural sea
empíricamente universal no puede reflejar nada de la naturaleza del hombre… […]…en suma lo que necesitamos es busca relaciones sistemáticas entre diversos fenómenos… […]… una concepción en la cual factores biológicos, psicológicos, sociológicos y culturales puedan tratarse como variables dentro de sistemas unitarios de análisis… […]…se trata de integrar diferentes tipos de teorías y conceptos de manera tal que uno pueda formular proposiciones significativas que abarquen conclusiones ahora confinadas en campos de estudio separados…”5
Para una mejor comprensión de su método se puede
recurrir a: “Persona, tiempo, y conducta en Balí”, 1969 6. Considera aquí que el estudio de la cultura ha sido un campo renuente al análisis teórico, porque se tratan con sistemas de “ideas semideformadas, nociones indiferentemente sistematizadas que guían las actividades normales de los hombres corrientes de la vida diaria ”6 Es decir que se para el autor la idea de pensamiento se vuelve como lo público, externo de los individuos y susceptible de ser analizado. Geertz como método de trabajo se sitúa en describir y analizar las estructuras significativas de la la tarea de ...” experiencia… […]… tales como son aprehendidos por los miembros representativos de una determinada sociedad, en un determinado momento de
tiempo, en una palabra, una fenomenología científica de la cultura
…”7
El objeto de estudio de la antropología consiste entonces
en un objeto determinado por la concepción semiótica. ”… Lo que encara el etnógrafo…[…]… es una multiplicidad de estructuras conceptuales complejas, muchas de las cuales superpuestas o enlazadas entre sí, estructuras que son al mismo tiempo extrañas, irregulares, no explícitas y a las cuales el etnógrafo debe ingeniarse de alguna manera para captarlas primero y para explicarlas después…[…] Hacer etnografía es como tratar de leer un manuscrito extranjero, borroso, plagado de elipsis, de incoherencias, de sospechosas enmiendas y de comentarios tendenciosos y además no escrito en las grafías convencionales de representación sonora, sino en ejemplos volátiles de conducta modelada…”8
Ciertamente por ello la etnografía debe ser descripción
densa9
Es así que Geertz sostiene un concepto delimitado de
cultura que no presuma universalidad ni contenga múltiples acepciones, según el mismo: “la cultura denota un esquema históricamente trasmitido de significaciones representadas en símbolos, un sistema de concepciones heredadas y expresadas en formas simbólicas por medio de los cuales los hombres comunican, perpetúan y desarrollan su conocimiento y sus actitudes frente a la vida” 10