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BIBLIOTECA CLÁSICA GREDa S, 61 PLATÓN

DIÁLOGOS
1I
GORGl AS, MEN I:XENO, ElITlD EMO, MENÓ N, CRÁTILO

TJ.AOUCO ONES, INn.OOUCCIONlS y NOTAS


PO,
l· CA LONGE RUIZ, E. ACOSTA Mí ND EZ, f. l. OllVI ERI,
J. L CALVO

EDITORIAL GREDOS
A sesor para la sección griega: CA nos O All.cfA OUAL .

Según las no rmas de la B. C. O., las traduccícnes de este volumen han


sido revisad as por Jos é LUIs NAVARRO y CA RLOS O ARe i A O UAL.

© EDITO RIA l. G Rt;UOS . S . A.


Sánchez Pacheco, SI. Madrid . Espai'ia.

P l l lllEll A ~D ICIÓS. rnl YO de 19S3.


l. " reimprni6n, enero de 1987.
GORG IAS
Las traduccio nes, inlrod ucciones y no tas ha n sido llevadas a cabo pOI'":
J . Calonge (Gor,itu), E. Acosla (MrlliulIo) . F. J . 0 1ivieri (Eutidemo y
Menó n) y J . L. Ca lvo (Crátilo).

Depósito Legal : M. 627·1 987.

ISBN 84-249·088 7-2.


Impreso en España . Printed in Spain.
Gráfl (as Có ndo r, S. A .• S ánc hez Pacheco , 81, Mad rid , 1987. - 6ll30.
I •

INTRODUCCION

E l Gorgias es u n di á logo con sidera blemente más la r -


go que los que le preceden en la serie cronológica. De ntro
de toda la o br a platónica es el cua r to en e xtens ió n . Su es-
tructura es distinta de la que presentan los diálogos a n-
teriores y también lo s poste r iores, con la e xce pción del
li bro 1 de la República, por el he cho de que no es un ín te r-
loc utor principal el que co nve rsa con Sócrates desde el
principio hasta el fin . En este diálogo intervienen sucesi-
va mente Gorgias, Po lo y CaJicles y, d urante la inte r ve n-
. ci ón de cada uno de ellos, los otros son pe rsonajes mu-
dos, a unque c ont inú an sin re t irarse escuchando a los de-
más. La sucesión de in te rl ocu to r es se fu nda en que quien
to m a la palabra a dmite que el anterior ha comet ido un
e r r o r. Si é l no rect ifica el desarrollo de la conversación
desde e l punto en que se ha cometido el error, ha y que
acepta r u na co nclusión co n tr a r ia a su pe nsamiento. Las
contr a dicc iones en que caen sucesivamente Gor gia s y Po lo
so n de ti po moral, a l aceptar opiniones adm itidas por la
m ay or parte de la ge nte , La distinta personalidad de los
interl ocu to r es presta nuevos matices a la conversación .
No s610 po r esta estructura fo rma l es e l Gorgias un diá-
logo que llama la atención. Ha sido s iem pre de stacado el
hecho de que está escrito apasionadam ente, En é l pesa mu-
cho más e l vigor de la s afirmacione s profundamen te se n-
tidas que el rigor lógico de seable . Las obras inm ed ia t as
11 •

lO DIÁLOGO S GORG IAS 11

a la m uerte de Sóc rates o q ue se rel acionan con s u p ro ce- to de una soc ie dad justa en la c iud a d. El poder qu e esta
so y ju icio, s in q ue oc ulte n la in di gnación , ofrece n opinio- última p udiera alcan zar no merecía estimación pos itiv a ,
nes más t r anqui las y s ua ves, diríamos resignadas , ante el s i ese poder no e ra justo.
do lor por la inj u stici a cometida con el maestro. Podr ía- Es ta es la ca us a cent ral de la cris is perso na l de Plató n
mos deci r q ue e n esas o bras te nemos cl a r amente ex pre- que se m an ifiesta e n el Gorgias. Ya desd e la Anti gü edad
sa da la acti tud e nt r isteci da de l d iscí pulo an te la m uerte lle va es te d iál ogo e l su btít ulo de «Sobre la r et orica - qu e
de Sócrate s. El a pa sio namiento mani fes tado en el Gorg ías se deduce o bv iamente de la discusión con Gorgia s. Si a l
parec e que p rocede de a iro moti vo d iferente del de la terminar esta conversació n hubiera termin ado e l di álogo,
muerte de Sócrates o de c ua lq uie r o tro hecho con ella és te no dife r ir ía de o t ros de la primera é poca ni e n e l de-
relaciona do '. Hay qu e bu scar una razón d is tinta . Pro ba- sa rro llo ni tampoco en el ta maño. Pe ro esta pr im e r a pa r-
blem ente se t ra ta de u na c risis personal. A la e dad de c ua - te q ue da eng lo ba da e n la tota lid ad del d iá logo qu e m ano
r e nta años , a s u regreso de Sicilia, Plat ón tie ne ac umula- tiene un a unid ad indudable.
da una e xpe rie ncia e norm e. aunque poco agradable. Na -
ció t res a ño s de spués de empezar la guerra del Pelopone- La d iscusión sobre si este di á logo t rata realme nte so-
so. A la ed ad de cat o r ce años t uvo que recibir con estu- bre retórica o sob re mor al se man tie ne aun en nuestros
por la informaci ón, que lle gaba, del desastre de la expe- dias , pe ro ya procede de la Ant igüe da d. Olimpiada ro es-
dici ón a Si cllia y la s s uc esivas no t icias desagradables so- cribe: «a lgunos dicen q ue su objeto es t ra ta r sobre la re -
bre el cu rso a d ve rso de la gue rra. Ta m poco son buen a s tórica. ot ros que es un a conversación so br e lo justo y lo
la s no ticias en politica in terior, la revolución de los Cua- injust o - oPa r e ce que la unid a d de que queremos ha b la r
t r oc ie nt os. e l regreso de Alcíbtades. etc. La ruina de Ate- no es la de una integración de dos elementos dife r en te s
nas en 404 , e l gob ie rno de los Treinta, de l que formaban q ue se po tencian a m edida qu e se tratan uno y otro
pa r te sus parientes próximos Critias y C érmídes. el res- suces iva m e nte l.
tablecim iento de la de m ocr a ci a manc hada. para él. po r la La retór ica, en la vid a a teniense, e ra p rá c tic a men te la
injust a m ue rt e de Sóc rates y, especia lmente. la dura ex- única vía de la act ividad polític a. Nadie qu e no es tuvie ra
pe ri en ci a del viaje a Sici lia . emp re nd ido con tantas espe- capacitado para hablar en público podía dedicarse a la po-
ra nzas , so n la s sec ue nc ias s ie m p re a gi tada s que le han lít ica . Has ta pa ra act ua r ante los t ribuna les, co mo acusa-
acampa nado ha sta s us 40 años. No e ra pos ible e n un a pó- do o co mo acusado r, e ra necesario d irigirse pe rsona lmen-
lis g r iega a par tarse de la vida política en la medida en q ue te a los juec es, a u nq ue la defe n sa o la ac usació n qu e se
le es po sible ha cerlo a un ho m bre de nues t ro s d ía s. E l es- exponía hubiera s ido escr ita po r profesio nal es ded icados
pirit u re flexi vo de Pla tó n pudo eje rc ita rse a mpl iamente
pen sa ndo e n el hecho m ismo de la organización polít ica. 1 v éase. en es te sentido. la op inión d e E. R. n o c cs. P/a/o. Gorgia $,
Para s u m ent e, te nia va lor, so bre todo, e l establec im ien - Dxford. 1959, pág. 3. El m ism o DODD~, ibid. , pág. 1, q ue hace la ci ta en
griego, no la u tiliza pa ra deli mita r el objeto del Gorgil15, sino para de-
mostrar q ue ya e n la Antigü eda d no se considera ba acerta do afirma r que
I No me es posib le hoy man tener la ide a e:o; pu est a en 1951 de que la cues t ión t rat ad a e n e l Gorgia$ era la re tó rica. Guth rie co nsid e ra q ue
e l esc r ito con tra Sócrates del retóri c o Poltc ra tes fuera la causa de l ca - la d ef tnlc ién de OJim piodoro, qu e darno s en pág. 13, es . d irlcl lmc nle
rá ct er a pasionado de es te d iá logo. meju rable «.

i
12 DI ÁLOGOS GO RGIA S 13

a esta fu nción. En una ciudad como Atenas, e l conoci m ien- Por las razones que se han ido exponiendo resulta bas-
to y dominio de la re tórica no era simplem ente el adies- tante claro que en este di á logo no se tratan dos cuest io -
tram ie nto en un bello eje rcicio, si no una as piración muy ne s , n i hay interrelación de una co n la o tra. De principio
!I
viva y generali zada, y una ne ces idad pa r a todos lo s q ue a fin ha y un so lo ob jeto perfectame nte de fin ido ya po r
I Olimpiodoro: «discu tir sobre lo s principios morales qu e
tuvieran el p royec to de ejercer la polí tica . E l p ue blo de-
cidía, pe ro decidía lo que el orador m ás pers uas ivo h ab ía nos conducen a l b ien es tar político» . Podrí amos p regun-
propuesto. Un orador hábil era, en consecuenc ia , un polí - tarnos por q ué Plat ó n no ha colocado a un político como
tico poderoso; 0, dic ho de otro modo. el único m edio de interlocuto r de Sócrates des de el com ienzo. Supongamos
llega r a se r un ciudadano influyente lo proporcionaba, cas i que ha querido de jar claro , en boca del más prestigioso
con e xcl u sividad, la retórica. No e ra difícil confundir ora- maes tro, qu e la oratoria, el in st r um ent o po r a ntonoma-
toria y polí t ic a. En efe cto, el t érmino g riego rhetor sirve sia de la a ct ivida d política, es ajena al conocimiento de
lo m ismo pa ra indica r orador qu e político . No debe, pues, lo justo y lo injusto . Gorgias t ie ne que reti r a r se de la co n-
extrañarnos qu e Platón haya atacado conjuntamente a la ve rsación más bien po r e rro r de concepto qu e por una to-
retórica y a la polít ica ateniense; con más precisión, q ue ma de postu r a moral. Por el co nt r a r io, Po lo empiez a afi r -
ha ya a tacado a la po lítica a tr a vés de la r e tó r ica . mando qu e el hombre injus to es fe liz, lo que explica que
De est e in strum e nt o de la acci ó n política se t r a ta en la discusión tome u n to no m ás vivo . Pe ro las afi rmacio-
e l Gorgias. Lo qu e dej a fu e ra de c om ba te a Go rgias en la nes de Po lo no ti e nen otro alcance qu e el de la e xpresión
conversación es, precisamente, haber admitido que el ora- de un estado de cosas evidente para u n anális is supe rfi -
dor conoce lo ju sto y lo inj u s to . Porque no podemos olvi- cia l. Mu y dis t inta es la pos ición de Calicles, que pret ende
dar en qué plano coloca Platón la activid ad po lít ica. Para se ntar racionalmente la necesidad de la injusticia. Só lo
él , no se puede realizar m ás qu e de nt ro del á mbito de la los escl a vos y los débiles - d ice- pueden alabar la justi-
mora l. Cuando Tucídides (11 100) nos ha bl a de Arquelao, ci a, pero el hombre fuerte no puede po r me nos de se r in-
dice qu e hizo por Ma cedoni a más qu e los oc ho reye s que ju sto. Má s aún, so stiene la paradoja de que lo verdadera-
le prece die ron. El ju ici o pragmático de es te historiador mente ju sto para e l fuerte es cometer injust icia .
no tiene e n c ue nta m ás que las rea liza cio nes po líticas de
Arquelao. Pa ra Tuci dides, no cuen ta nada la moral en la En c ua nt o a la fecha de composición, la opinión más
polític a. En ca m b io, e l juicio que Platón hace d e Arque- admi tida actualm ente es la de que la obra fue escrita des-
la o (r epetidame nte, en 470d y ss., 479d y 525d) es la otra pu és del viaj e a Sicii¡a . Hay numerosos datos e n el Gor-
'1 cara de la m o neda. Para él, es e l hombr e más perverso y gias qu e incl ina n a pensar en el efe c to todavía vivo del r e-
será, en el Hades, un tí pico ejem plo de las a lm as in cura- cie nte viaje. Como se obse r vará en la lect ura de l diá logo ,
bles a cau sa de la magnitud monstruosa de los delito s co- hay fre cuentes a lu sio nes a Italia y Si cilia y a desarrollos
met idos. La razó n es qu e, para Platón , la política es una de ideas a llí n acid as, de las q ue no es presumible q ue se
par te de la moral. Cabe decir aún m ás: es la única vía ef ec - tuviera a decuada inform ación desde Atenas. Además , to-
tiva de ejer ce r u na m ora l so c ia l. No só lo socia l sino tam- das esas a lusiones llevan la co nnotación de a lgo adqui ri -
bién individual, porque Pla tón pi e nsa qu e la m oral del in- do di rectam ente más qu e a través de otras personas lle-
dividuo está en r e la ción co n la moral de la soci e da d. ga das a Atenas o de escri tos. Ta nto Dodds como Guth r ie,
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por ci ta r a u to re s recientes. admiten si n ma yor d iscus ión ta de ob ras li terarias e n las que no só lo los pen s a ml en-
u na fec ha inmedi a t ame nte po ste r io r al prime r viaj e a tos, sino ta mbién los escenarios y las fec has so n prod uc-
Sicilia. to de la im aginaci ón del a u tor. S i Pla tón hace interv eni r
• EI Gorgias es el d iá logo má s mod erno de lo s d iálogo s junto s a perso najes qu e quizá jamás se re un ieron en e l mis-
de Pla t ón » J. Es ta a firmación es fácil mente com p ro ba ble mo lu gar, o s i se perm ite a lgún di slate c ro noló gico que
po r la propia lectura del di ál ogo. Los problemas e n é l n-a- puede ex t ra ña r a l gusto minu cioso y de ta llist a de los mo -
tad os son los mi s mos que p reoc up an al hom bre de hoy. de rn os, ténga se e n c ue nta q ue sus conte m po rá neos, más
Además, están expue stos con gran belleza literaria. La te n- incl inados a lo a bs trac to, no fij a ban s u a tención e n es tos
s ión e mocional del a utor se transmit e a ún íntegra me nte puntos . Pa ra ello s escri b ió sus ob ras; no de bem os, por ta n-
al lec tor. Por ot ra parte, es un diá logo que se puede se. to, a plica r nuest ras id ea s a lo que no fue escri to pa ra
gu ir de p ri ncip io a fin sin una p re pa ración fil osófica pre- nosot ros.
via. Las con clu sion es precipit ad as o las fa lt as de lógic a La acci ón del d iálo go se desa r r olla a s!. A un luga r irn-
q ue el lec tor puede e nc ontra r, que requerir ía n ma yor ex- prec iso, que lo m ismo pudie ra se r un gim nas io o cualq uie r
plicación. no entor pec en la secuencia de las id ea s y tie- otro reci nto, llega Sócrates acom pa ñado de Querefon te,
nen el con trape so literario de l a pa s ionamiento en la ex- en el mo men to en que Go rgi as ha te r m ina do una de es as
posición. En es tos datos podemos resumir la ernodern i- di se rtac iones a que tan a fic iona dos eran lo s sofi st a s. Da
dad .. del Gorgias. princi pio el diálogo con un a breve conve rsación entre Que-
La s fec has lim ite s d en tro d e la s q ue pued e s it ua rse la refo nte y Po lo sob re el a r te de Go rg ias. A parti r d e 449 a,
acción de este di á logo son los a ño s 427 y 405. En la prt- Sóc rates mant ie ne la conve rs ación a lo la rgo de todo e l
me ra de ella s, Gorgias fue por primea vez a Ate na s como d iál ogo, pr imero co n Go rg ias, luego con Polo, po s te r ior-
jefe de la embaj ad a que e nvia ro n los leont inos para pedi r men te con Ca licles y, po r últ im o, c ua ndo és te a ba ndona
a yuda con tr a S iracusa. En favor de es ta fecha ha bla tam- la dis cu sión, continúa so to has ta el fin.
bié n la refe renci a a la reciente m uerte de Pe ricles (S03c ), Manifiest a Sócrates qu e, pu esto que Gorgias es orador
ac aecida en el añ o 429. Otros da tos, sin embargo, nos a pa ro y maes tro de ret ór ica, debe estar en condici ones de deci r
ta n m uc ho de esta po sib ilidad. Se habla de Arquela o co- c uá l es el obje to del a r te que profesa (449d). En op inión
mo t irano de Macedo nia (470d), s itu aci ón que no alcanzó de Go rg ias, la re tór ica es el a rte que t ra ta de los d iscu r-
hasta el añ o 4 13. Ha y una e vide nte alusió n al proceso con- sos. Pero ta m bié n ot ra s m uc has a r tes e-objet a Sócra tes-
tra los gene ra les vencedores e n el combate na val de la s ve rsa n sob re d isc u rsos; la med icina. por ejemplo, so bre
Arginusas (473c), hecho qu e nos lleva hast a el a ño 406. Por los que se refiere n a la cu ración de los enfe r mos. Go rgi as
t a nto, la acción pudo t ene r lugar en u na fe cha inde termi- a ñade qu e en la s de más a r tes inte rvi e nen operacion es ma-
na da . entre los añ os 427 y 40S. nua les. Pe ro esto no s ucede -dice Sóc rates- con la arito
Pe ro ha y que te ner e n c uenta que los diá logo s pla tó ni- menea y la geo me t r ía , a las que , ev idente me nt e, Go rg ias
cos no son el fiel relat o de conve rsaciones realment e ma n- no desea ría llama r re tó r ica. En vis ta de la objeció n, a fir-
te nidas po r los pe rsonajes que e n ellos int ervienen. Se t ra- ma éste que los di sc u rsos de los q ue se ocupa su a r te se
refie ren al mayor bie n para el hombre, es to es . prod ucir
l pocos. ¡bid .• pllS. 387 . la pe rsu a sión por medio de la pa la bra . Y ¿sobre qué pe ro
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s uade la retórica ? S e gú n Go rg ías. so bre lo ju st o y lo in - una práct ica y una r utina, de l m ism o modo q ue el a r te c u-
justo ante los tribunales y las as a m bleas. Pe ro , en este ca- lin aria ; un a y otra so n form as de la a d ulación que tra ta n
so , hay q ue d istinguir entre cienc ia y creenc ia; pue de ha - de sus ti tu ir a l co noci m iento ra zonado de la s verdadera s
be r una c reencia fa lsa y o tra verda dera. pero no sucede a r te s . Se p roduce un a s uti l d iscus ió n so br e s i e l q ue ha ce
lo m ismo con la cienc ia . ¿ De q ué persuasión e s a rtífice lo que q uiere es poderoso, suponiendo que el poder e s u n
la retórica , de la que da lugar a la creencia o a la c ie ncia ? b ien para quien lo posee .
Es evi dente -dice Go rgias- que só lo de la que p ro d uce A co ntin uación nos encontramos con uno de los te mas
la c ree ncia (45 4e ), pero su poder e s maravil loso. Son lo s m ás importa nt es de l d iá logo: e l m a yo r m a l es cometer in-
o rad o res, no lo s expertos en la gue r ra, los que aco nsejan jus tici a (469b). Es ta afi r m a ción r es ulta inad m isible para
en las a sambleas cua ndo se trata de eleg ir gene ra les, y lo Po lo, y a fin de p robar s u fa lse dad, c ita e l ca so de Arque.
mismo sucede respec to a otros t écn icos. Más a ú n, el ora- lao, q uien , a pe sa r de s us n umerosos e infa me s crlmene s ,
dor persuade a un e nfe rmo con más facilidad que el pro- es fe liz. puesto que rei na e n Mac edo nia . Pero -alega
pio m édi co y. ante la mult itud. hace prevalecer su opinión Sócrates- la d is cu sió n exi ge pruebas , no testigos; pues
so b re la de c ualq u ie r o t ra persona. Aho r a bien, s i un ora- e l ún ico te s tigo válido es el int erloc uto r. El inju s to ja m á s
dar hace u so inju sto del gra n pode r que le pro porci o na puede ser fe liz, pue s s i j-ecibe c a st igo se rá muy desgr a-
su arte , no se debe culpa r de e llo a la ret órica ni a los m ae s- ciado, y si no lo r ecibe lo será a ún m á s (472 e). Co m et e r
t ro s q ue la enseñ a n. injusticia e s más feo q ue su fr irla y, por tan to, m á s pe rju-
Gorgia s t r ata de poner fin a la d is cusión con un fú t il d icia l. Pu e st o que la in ju st ici a afec ta a l a lma, e s el ma yo r
pre texto, pero a nte e l deseo de los oyentes se ve forzado de los m a les y, en co nsec uenci a , se r a un bi en li br a r se de
a proseguir (458d). As l pues , al re anudarse el di álogo, Só- ell a por m e di o del cast igo, mient ras que no su fr ir é ste es
crates in si st e sobre a lguna s a firmac iones hecha s por Gor - pe r m an ec e r e n la m a yo r desgra cia (479a). Si lo mejo r pa -
gias. Ant e la m u ltitud el o rado r es m á s persua s ivo q ue e l ra el in justo es pagar su pena, ¿c uá l e s la ut ilida d de la
m édico y, por lo tant o, el q u e no sabe, más qu e e l que sa- r e tó r ic a ? En todo cas opod rta se r vir para acus a rnos a
be; t a m b ién res pecto a la s de m á s a r te s , aun s in conoce r- noso tros m is mos y, así , q ued a r c uanto a ntes li bre s de la
la s, puede a pa recer más sa bio que los que r ea lmen te sa- injusticia.
ben. ¿Y re spect o a lo justo y lo injusto ? ¿ Es s ufic ie nte q ue Las conclusiones a nteriores han sa cado d e quicio a Ca-
pa se por tener estos conocimientos , o es preciso que lo s lic les , fiero defe nsor del dere cho de l m ás fuerte. Asom-
ten ga re a lm ente ? (459d). Go rgias a d m ite lo segundo. Só- br a do por las in só lit a s afi rmacio nes q ue acaba de o í r , só-
erates concl uye que quien conoce lo justo es ju sto y q ue lo puede suponer q ue Sóc r a tes ha hablad o en bro m a. En
e l ju sto jam á s pue de obrar injustamente. Po r tanto, ~có­ su interve nci ó n (48 1·523), Calicl e s e xpo ne su fa m osa te o-
mo es posib le decir que no se debe a c usa r a la re tó r ica, r ía , procl a m a da t a m bié n "por o t ros sofis tas y q ue tanta r e-
s i un orado r obra injusta m e nt e ? s o na nci a ha te nido e n e l pensa miento mode rno. Segun é l,
En este momento e m pi eza la in te rv enci ó n de Po lo hay que d istin g uir en t re na t u raleza y ley ; por n atu r a leza
(46 1-48 1). En su opin ión, el erro r de Gorgia s ha consi s ti· e s m á s fe o sufri r inj u st icia; por ley, en cambio , cometer-
do en decir que e l o ra d o r debe conocer lo jus to. Manifies- la. La s leyes e stán esta blecidas por los débil e s a fin de con-
ta Sócrates q ue, a s u e nte nder , la r e tó ri c a no e s m á s que tener y a tem o ri zar a los fue r te s ; por t a nto, é st os d eb en
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18 DIÁLOGOS GO RGIA S 19

despreci a rl as Y pisotearlas . En su op inión . S óc r ~te s ~o. versact ón: el hombre moderado es justo, y el jus to, feli z;
d ría compre nde rlo fá ci lmente , si a bandonara la h lo.soh a. po r ta n to, ha y q ue hui r del desenfren o y practica r la j us-
que, s i bie n es adm is ib le para la juvent~~, re sult a mclu- ticia . Un ho m b re j us to pu ede su fr i r infin itos da ño s y ul-
so noc iva pa ra un homb re maduro. ValJen dose de pasa- t rajes, pero es ma yor el pe rjuicio pa ra qu ie n se los ca usa
jes de los poetas, que le s irven al .m.ism~ tiem~ pa ra ha- (508e ). Ouizá el j us to no pueda defen de r se a nte la ínj us t l-
ce r gala de e rudición, za h ie re y r jdi c uhza a Sóc rat es con ele. pe.ro el inj us to no pu ede libra rse de ella más qu e por
el p re tex to de aconseja rl e (486d). . ' el cas tigo de su s cu lpas. Los medios qu e colocan a un hom-
Al exam inar lo ex pue s to por su ín terloc u to r, S ócra tes bre e n sit uació n de no padecer injust ic ia le cond ucen, sin
c ree nece sa ri o acl ara r el se nt ido que da Calides al con- e m ba r go, casi fatal mente a co me te rl a, y es to, seg ún ha
ce pto de e m ás fu e rte - o Respo nde que el hombre más Fuer- que da do dem os trad o, es el ma yor de lo s ma les (5 1Ia).
le es el ca pa z de a limentar las ma yore s y má s n ume~osa.s Cua nt o más la r ga sea la vida del inju sto, mayor es s u des.
pa s ione s (49 Ie). Dos bellas al~~orías. de .p~edencla pi- gracia; e n consecue nc ia , no se debe p rocura r conserva r
tagórica, es ta blecen una 5 0l UCI 0 0 de eontlfi Ulda d en la su- la vida a toda costa, s ino vivir lo mejor posi ble. Sócrates
cesión d e preg untas y re spuestas, pero no convenc en a Ca- cens ura a Tem ístocles, Cimón, Milciades y Per icles. Aun .
Iieles de que la vid a moderada es mejor q ue la d isoluta . que fueron buenos servidores del pu eblo, no buscaron s i.
Asl pues, an te la persist encia de su interlocutor. Sócra- no sa ci a rl e en su s apetitos, y no se ocupa ron de moderar
te s entabla una disc u sión en caminada a demostrar que el y reprimir su s pasiones, única m is ión del buen ciudada.
p lace r y el bie n no son la m isma cosa, hasta llegar a la no (517c). Tan absurdo es que los políticos se quejen de
conclus ión de qu e unos pl ac e res so n buenos y otros m a- se r tra tados injus tamente por su s gobernados, como que
los (499 b). los sofis t as , que aseguran enseñar la virt ud , digan qu e su s
En opin ión de Sócrates, la cuestión qu e s~ deb a te es di scípulos ob ran injust a mente con ellos (5 19c). La verde-
de máx ima importancia; se t ra ta de sabe r de qu e mod o ha y de re pol ítica, según Sócrates, es la que el eje rci ta; pero
que vivir. ' Se de be elegir la polit ic a, como aconseja Ca li- como no trata de ag rada r, sin o de p roc ura r e! mayor bie n
el es o la f¡losoCia? Puede ha ber un a o ra toria po lítica que a los ci uda da nos, le sería mu y difícil defenderse s i s u vi.
t ienda a l bien de I~s ciudadanos; pero, según Sócrates, no da cor r ie ra peligro . Pero la m ue r te se pu ede sopo r ta r fá-
ha ex ist ido en Are nas más que la q ue trata de adu la rlos ci lme nte, cuando no se ha dicho ni hec ho nada injusto con-
1ra los di o ses ni cont ra los hom bres.
(S03b).., In te nta ba n los fa mosos po líticos que
?
no m bra Ca-
,
Iiel es mejo rar a los gobernados po r ellos . Es ta c ues tl.on Term ina el diá logo con el bellís imo mito sobre el j ui-
condu ce a de te rmina r pre via mente e n qué consiste el bien cio de los m ue r tos y el des tino fina l de las a lmas ' . S in
del alma. Pa ra Sócra tes, en el orden, la mode ración y la qu e el relat o pierda u nidad, se intercalan e n él id eas que
justici a; el castigo y la re prensión s~n, s in du? a. mejo res s irve n pa ra el eva r a un plano é tico su bl ime las conclu sio-
que el desen fre no qu e Calicl es ha bla defen~ld~. Bes conseguid as. As í, la opin ión corr iente, a plicada aquí
Al llega r aqul, Calicles, que ya a n tes ha bla m ten.t~do a la vida ultrat e rrena, sobre los efec tos del castigo. Só lo
aba ndonar la disc u sión , se niega a continuarla. A petición • Comparar este milo co n los de otros d iálogos de Platón (Fed. I07c
de Gor gia s, que exp resa el de seo de los demás oy en tes, Só- y SS., R ep. 6 14b y ss.). el. c. GA ~c fA GUAL, MilOS, vi IJies, h éroes. Ma d ri d .
1'111 1, págs. 45-6 1.
c ra tes es tablece las conclus iones qu e se deduc en de la con-

1:
,
GORGIAS 21
20 DIÁLOGOS

lineas u clura d~ Bumet Varia"t~s preferidas


es prov ec hoso para los que ha n come tido deli t os repara-
b les: sir ve n e n ca mbio . única me nte de ejemplo para lo s 476 e Tl llvu Tl Tt ll VEl n e;
de más hom bres los te rribles s ufri m ie ntos de aque llos c u- 482 b a va PlLOOT ó v TE dv aP l'-oo'IEi v TI;
yos delitos son irre pa rab les; ent re es tos último s estará, 482 d li:OI Tay e).a v I(a ny t ).o
488 . M Ilo IC; ).a ll:ou;
sin duda. Arquel ac , a quien su s inj u s tici a s hab rí an hec ho
488 e ~). Ttooc; 1WM ~T {OOI; 1'100
feliz. según Polo . Si b ien es c ierto que Sócrate s se ri a in-
ca pa z de def e nder se de una acusación a nte un tribu nal.
"9, 4>OO1V . O ~T a two l1l 15:'1'101 .

¿que ha rá Calicles an te e l juez que ha de deci dir su de st t-


no después de la mue r te ? la concl us ión final es que el me-
""
493 b
494 ,
.. 0 1 Gc; y E
ele fv , TO
ll 4p OÓ1l To
..al '::>v YE
E(O(V. ( otlvd C;) T ~
lIAE poUV
jor gé ne ro de vida cons iste e n vivir y morir p ract icando 491. I Il'llp oo8Ev. 15 TI I X(,lV l ¡.tllpoogev . KA A . TI l xwv ).'1-
la ju st ici a y todas las de más virt udes. ). r¡pdc; ] {vo pEic;.; zn. ~ I va
503 d Tí XVr¡ Tl e; etr¡ TOloO TOV TtXVT] TI C; . o t u TOIOÜTOV é v -
6:v6 p <x TOÓT(,lV nvó: 6 p o tOÓT(,lV TlVo: Yl:y o vt ·
NOTA SOBRE EL T E XTO [ YEYOvt 1l0 ¡] 00 11: [ X(,l VOlI ; KA fI . Oú li: EX(,l [ YWYI:
l y (,ly e 'lti:ic, e Iwco , 1l(;ic;. Efo!l t:<l . I C . • A ), ). ' !et v ..
An te la eviden cia de qu e el t ext o d e J. BURNET , PlalOnis Opera, yo L ll l, KA/\ , A H ' lCx v . ..
Oxfurd , 190 3 (reimpresió n 196 3) es más as eq uible al lect or qu e la rne guí- 505 e d 1lo ~ W TCol c, . d ll lvTOl elvcn. oór rcol f!t n o\ 1l 0 l~O<:.) ·
hc e edició n d e E. R. ü o oos. Plato. Gurgias, Oxford, 1959 , hemo s se guidO 1l011'l<T°la v eH
el texto de Burne t d eja ndo co ns ta ncia de las 1Iaria n tes má s des tac ada s 506 d 0 1> T ~ Etli:ñ l!t d A).l oTO ] oó x OÜTc..x; d li: fJ Kd AAlOTCl:
qu e no coinc id en siempre con las pro puest as por Dodds . Só lo figu ran 185 508b 01 6:9).10 1. 1'1 0 1 á 9A l01 (49 AlOl). i'¡
q ue, de a lgú n modo, impl ica n u na d istin ta inte rprela c ión de\ text o que 514a 4>i:iIJCV OÜT~ 9&¡.tEV OÓTo:.>c,
pued e in fluir en la tra ducción . 519 c .:n' oÓT ~e; T ~ e; U1l' OUTí1e; T® TT]C; "~C;

Edición de B ur m! / Variantes prefer idas


U"~as

456 e de).). ' ooTO I tiu.: oú Tl NOTA SOBRE LA TRADUCCiÓN


TOO T¡;'V 6:k ).(,lV
452 d TOÜ IDJ,.(,lV
454 d ápo: «ú á po: ó n oú Difere nt es. rnouvos han in flu ido pa ra que la traducc jón q ue a qui pre-
456 • . Tl e; 1Io"tE t¡ fin e; 'lCod. t¡ sen to no sea Idtnllca a la q ue publ iqu t en el a ño 1951. Es un a a legr ía
hf l 6 1.... a( liI
II
457e 1;111 6u~.0 (00 lia da desd eñab le la de volver sob re un tra ba jo rea lizado hace mas de trem-
..¡>be; M yov
" 9' 'lIpac; ).6)'00
Ó'l l lla). l v o ;:;
la añ~ '. En ~ri mer lugar, he revi sado el tex to griego q ue pu bliq u é en aqu e-
461 . ÓTI ov lIa .e dlClón j u nto co n l. t rad ucc ión . Es te trabajo realizado CO II tiempo y

..."'., 6}...).0c; f¡
TOOTO Ooo¡JoIOTl1l,i\
exx' f¡
Too r o 6l¡Io1toH .... i\ llp ~e; (o tfu
. ."v· ll a ).).O'V 6t ~6e . ó n ó'
o
t¡ulUi co n ma yo r gust o po r lo s te ma s te ~ t ua lesq o e ent o nces . ha s ido ta l
v~z más labo rio so y ag ra d a ble q ue efec tivo a la ho ra de p ro du c ir va ri a -
cienes e n la traducció n. 5011 ot ras las ra zon es q ue me han mo vido a re -
....o l-'ll(,l H Kll 'ltpOc; y~ 1I tIO Tl o d ac ta rla d e nuevo . Tre int a año s SO/l qu izá de m asiados para q ue un texto
li: ~v . TooT O oo4' lo r l1l:il ese r il.o , 50bre l od o de una traducc ió n, 110 mue. t re aspec to s poco acl ua ·
469 c T~ A6y~ t'll().O: ~ ü [ r~ ).6y~1 t ,n).,*,ü les. SI el p ro pio au tor encue ntra en ese te xto voc ablo s, expres iones e, in·
471 e TOÜ n ecs t ........o c [ rov ] ntpot ....KOO
22 DIÁ LOGO S

duw. rel aciono:ss inU,clicas q ue no so n ya In h ab itua les e n él, el lec to r


d e hoy co n u na din á mica p"'n¡onal de la lengua mb ágil y ló gicame n te
meno~ 'trad ic iona l, pod ria rec ibir la im presión de que no se le o frece el
Uso de la len gu a q ue él esp era ha lla r en un lib ro reci lm pub lica d o. Com o
ta mpoc o es fáci l e st a blecer lo s gra dos e n lo s q ue pa rec e c on ven ien te In -
rer vemr y q u é o tros pueden ma n tene r Su anrerjor redacción, ht llnado
;lo ca bo u na rev isión to la l. Est a re vis ión 00 ha imped ido. sin I;mbargo q ue

qu ede n ina lte rado s muc hos trozo s de la ve rs ión anl ..rio r. He bu sc ado só lo
GORG IAS
q ue és ta de 1983 esté ce rc a de lo q ue co n side ro d u so no rma l d e l c a ste-
llano esc rno de hoy . CA lICLE S , SÓC RAT ES , QU ERE fONTE, GO RGIAS, PO LO I

C AUCL ES . - Asl dicen qu e conviene llega r a la guerra 447a


BIBLl OGRAf iA y al combate ' , S óc rate s.

, Calic1es no s es co noc id o sólo a tra v és de este d ia lo go. Ni Platón


La bibliografí a ,I,Ob re el Gorgías es muy am plia pa ra poderla cí t.. r aq uí.
lo n omb ra en o tro d ial ogo n i ta mpoco lo e ne ning ún o tro ilutor , Se ha
Re ferencias bib liográficas a bund an tes has ta en tonces se ha lla n en m i edi- s u pue sto q ue se ri a un pe rso naje imag inado po r Platón . Tan bien tr azado
c ió n an te rio r: Pl"tón. WTt:ÚU, trad . de J uuo CUO!'<CE, Mad rid , 1951. La e sU e l ti po hu mano, qu e pa re ce d ifici l pen sar qu e no se lral e de un a pe r-
edicjón c itad a de Dooos rPlato. Go'l'ias, OxIord, 1959). pág s. 392 si¡s., otre. so n a re al. Se le a signa u n dt Tl1o, lo qu e no s ería necesa rio: se c ita n am i.
ce rko mal er ial, sob re lod o en lo re le Te n le a llrxlo y l.-ad uo;:cio nes. La gos SU)'OS bien ca rac te rizados. Des prec ia a los sofis tas (S21R1) y a parece
In trud uo;:c ión y la s no ta s de dicha ob ra p re sent an u n copiu so y, d iríam os, co n voc ació n IOla lme nte polltica , Es muy d igna ue len .,r en cue n ta la opi_
ex hau Uivo a rsena l de c itas, ensayos. est ud io s y tod o répo de referencia s nión de E . R. Donos (PIUlo . Gorgias. Oxfc rd, 1959, p ág. 13) d e que p ue de
so bre nle d iálogo . Vn con oci mien to detallado de todo Jo re leren le a l Wr. tra tarse de u n jo~e n ~a Jioso c uya s as pi ra cio ne s y, Quizá , la ~ ida se mal o-
gra ron en los a ño s próximos al fin de la gu erra de l Pelopon eso.L,
t:i"s no e s pos ible s in el al/ ..ilio impre sci nd ible d el libro d e OOOds. Un
Quere fo m e , de l deTl10 de Esfeto, e ra a migo y a dm ira do r de Sócrate s. a l
ex ce le nte es tud io con a bu nd a nte b ib liu gr a fía e n la s no ta s es el de W . K. qu e a co mpañ a ba con frecue ncia. Pe rte nec ta a lo s demócratas y se exilió
C. G UTHRIE, A Histo ry o/ (jreek I'h iloso pny, ~o l. IV : PI"lo. Th e "'"'' <lnd du rante e l gob ie rno d e los Tre inta . Htzo la p re gun ta a l o ráculo de Delfos
h is DlIl lot:ues. E" Tlier Pe riodoCa mb rid ge. I97S, pá gs. 284-31 2. Aunq u e la d e s; ha bla algu ien más ¡ a bio Que SócralC'$ (Apol 21 al. En las Nuks, Aris-
b ibliogra fia inc1u ida en las ob ra s o;: ita d¡u es a bu nda nlls ima, puede ra m- tófanes co nju n ta s u nombre co n el de Sócrates en el . PensalO r io . , Mu.
bien co nsu ltarse: T F. kENC E IR ~lN, Ptato, Co rgías, Oxfo rd, 1979, pá gs. 251·59. rió an les de l pro ceso de Sócra tes. - Ga rg ias de Leonnno s. Aunque la tr a -
Es la tra du cci ón m á s rec ie nte a l ing lé s, al·on seja ble po r su fid elidad a l di ción lo in cluye e ntre los sofis tas, no debla de ser ésa la opinió n de Pla.
rex ¡o gr iego; su s notas uenen int en ción hl o sófic a , no lilo ló gk a. Ión , q ue lo co ns ide ra mae stro. si b ien d is tingu ido, de retór ica y o rado r.
S ! e n tonce s Se lo hubie ra co n siderad o sofis ta no serian ex plic a b les la s
frases de Ca licJes e n 520a. Alca nZó gran lon ge vid a d, p ues deb ia d e se r
un o s diez anos ma yor qu e Só c rates y mu ri ó b as ta n tes ar'IOS des p u~s que
é l. Es u n p er so na je mu y inte resante en muo;: ho s otros aspec tos, pero, so.
bre lod o lo e s po r la in flu e nci a d e ~ u est tlo e n la re t órjca y e n la prosa
a rt ís tica . Su di Ripu lo más c a ra cte riza do fue Iséc rates. Su primera es.
ta ncia e n Alen a s fue en el an o 427. Pr o ba b leme n te mu rió e n Te salia. _
Pulu de Acraga n te es d isd pu lo de Gorgi a s. Se le conoc e só lo po r el Cor.
gia s y po r un p as aje d el Fedro (267<:), En 462b. Sóc ra tes d ice habe r leido
u n libro s uyo so bre re tó ric a .
1 Fr a se con q ue se reci bla a l Que lleg aba tarde a un e Sjl<:cláculo in.
24 DIÁLOGOS CORCJAS 25

S ÓCRATE S. - ¿Quizá nos hemos retrasado y, como suele SOc o- Oué es . d


de ci r se , hemos llegado de spués de la fies ta? OUER. - ¿ Qué quie res decir ?
CAL. - Y po r cierto después de u na m agnífica fies ta, S óc. - Por ejem plo, si hicie ra calzado respondería, si n
pues h ace un momen to Gorgias ha disertado J ma gi st r al- duda , que es lapa te r o; ¿ no co mprendes lo que digo?
mente sobre muchas y bell a s cuesti one s. OUER . - Te comprendo y voy a interrogarl e. Dime, Gor-
SÓc. - Aquí tienes, Ca licles, al responsable de nu es - gi as, ¿cs verdad lo que di ce Ca llcles . que te ofreces vo lun-
t ro retraso, Qu er efonte, que n os ha obligado a d et en e rn o s ta riamente a contestar a lo que se t e pregu nte ?
en el ágora . GORGIAS. - Es ver dad, Que re fonte ; así lo he proclama- 448a
b QUEREFONTE. - No impo r ta, Sóc ra tes , pues yo lo r eme- do hace un momento y sostengo que du rante mu chos años
d iaré; Gor gia s e s amigo m ío y r epet irá su exposición ante nadie me ha presentado una cuestión n ueva para m í.
nosot r os, s i te pa r ece a ho r a 0 , si quieres, en otra oca sión . OU ER. - Entonce s re s ponde rás co n fa cili da d, Go rg ias.
CAL. - ¿ Qué dices, Querefonte ? ¿Desea Só cr a te s o ír a GOR. - Puedes hacer una prueba de ello, Quer efon te.
Gorgias ? POLO . - Por Ze us, Ouerefonte, s i qu ieres haz la prue-
QUER. - Pr ecisam ente para eso hem os ven ido. ba conmigo . Me parece qu e Gorgias est á fat iga do porque,
CAL. - Pues ent onces venid a mi ca sa cuando que ráis; hace poco, ha tr a tado so b re much as cosas .
Gorgias se aloja en ella y d isert a rá a nte vosot r os. OU ER. - ¿Qué dices. Polo ? ¿Crees qu e tú conte stas me-
SOco- Muy bien, Calicles; pero ¿estaria dispuesto Gor- jor que Gorgias?
e gias a dialoga r con nosotros? Porq ue yo deseo p regun tar- POLo- ¿Qué im po r ta , si re spondo suficientem e nte a b
le cuá l es el poder de su arte y qué es lo que proclama y tu s preg untas?
enseña. Qu e de je el resto de su e xposici ón pa ra ot ra vez, OU ER. - No importa nada, per o, ya qu e es tu deseo,
como tú d ice s. conte st a .
CAL. - Lo mejor es preguntarle a él mismo , Sócrates, POLo- Pregunta .
pues prec isamente er a éste un o de los puntos de su expo- QU ER. - És ta es m i pregu nt a . Si Gorgias fuera cono-
s ición; nos invitaba ' a hora m ismo a que cada uno de los ce do r del m ismo arte que su hermano H er ódi co \ ¿q ué
que aquí esta mos le pregunta r a lo qu e quisiera y asegu- no mbre apropiado le da r íamos ? ¿N o le daría mos el mis-
raba que contestaría a todo. mo que a aquél?
SOc o- Dic es b ien, Que refonte, pregú ntale . POL. - Sin duda .
OUER. - ¿Qué debo preguntarle? OUER. - Así pues, nos e xpresaríamos con pr opiedad
lla mándole médico.
tcr esan te e ag radab le. corno lo e s para ( ali des la exp os ició n hech a por POL. - S i.
Gorgias. QUER. - Y si fu e ra experto e n el mismo arte en qu e lo
J Con e l ve rbo ep ideik nys /hui y e l sustantivo epídeiksis, se e xp res an.
fr ecuent eme nte, Jos a lardes de e locuencia y e rudición de <j ue hacían ga- es Aristofonte', h ijo de Agl aofonte, o que el herman o de
la lo s so fis ta s y que ta n to a traían a la j uventud aten iense. Véans e' Pro - l Respecto a la fo rma de la pregunta, d . Pro/ág. 31l e. No d ebe co n-
lág. 310b Y ss., Hip. Muy. 282c . fundi rse a este Heród ico, hermano de Gorgías, co n He ród ico de Mégara
4 Parece q ue fue Gor gias el que inició la costumb re, seguida por too o de Sclimbria, d el qu e habla Pla tó n en Pro /ág. 316e y Fedro 227d .
Jos lo s sofistas. de ped ir a su audite rie que le prop usiera la s más dife· 6 Ar istofonte y Aglaofo nte fueren pintores fa me sos. citados po r p Ji.
rentes cues tiones. C ICE RÓN, De f'inib . 11 1. níc e l Viejo; el he rm an o de Aristefo nte fu e el célebre Po lignot o .
26 DI ÁLOGOS GO RG I AS 27

Ari stofo nte, ¿qué nombre le dar íamos pa ra llamarle con tud y br evedad a los ejemplos q ue te pr o puso Qu erefon-
propieda d? te, dime también ahora cuál e s e l a r te de Gorgias y qué 449a
e PO L. - Es evid ente que p intor. nombre debem os dar a és te. Pero, m ejor a ún , Cor gt a s,
QUER. - Pue s, e n es te caso, ¿de qué a rte es conocedor d inos tú m ism o qué debemos llamarte, en r a zón de q ue
y qué le llam aría m os para ex p resar nos r ec t a mente? e res há bil en qué arte.
POL. - Ex iste n e nt re los ho mbres, Ou e refont e. mu- ........ GOR. - En la retó rica, S ócrates .
c has a rtes elabo r a das há bilment e partien do de la e x- So c. - Así pues, ha y que llamarte orador.
pe ri encia 1, En efecto, la ex peri encia hac e q ue n uestra Goa. - Y buen o r a dor, Só c r ate s, s i q u ie res llamarme
vi da av ance con arreglo a una no rm a; en cambio , la inex- lo que m e u fano de ser» , c omo decía Ho m e ro.
periencia la conduce a l azar. De ent re es tas a r tes un os ejer- SÓc. - Sí q u ie r o.
cen unas y ot ro s otras de modo dis tinto , y los mejores GOR. - Pue s llám ame a sí.
practican la s más elevadas. En t re es tos últimos se en cue n- Soc. - ¿ Debe mos decir ta m bién q ue eres capaz de ha- b
t ra Go r gi as , q ue culti va la más bella de la s a r tes. cer o r ador e s Va otros?
d So c. - Parec e , Gorg ia s, que Po lo es tá b ien p r epara do GOR. - Procl amo e sto no só lo aquí , sin o tam bié n en
pa r a pr onunci a r d isc u rsos, per o no cumple lo qu e prome- o tras parte s.
t ió a Que r e fonte. Sóc. - ¿ Estarlas d is pue sto, Gorgias , a c ontinu ar d ia-
CORo- ¿ Qué d ices exacta mente, Sócr at es? loga ndo com o a hora lo es tam os haciendo, preguntando
S oc. _ Me parece que no cont es ta plenamente a lo q ue unas vece s y resp ond iendo o tras, ya dejar par a ot r a o ca -
se le pregu nta. sió n eso s la r gos di scu r sos de los q ue Po lo ha em pez a do
CORo- Pue s in te r róga le tú , si quie re s . a darnos una m ue s tr a ? No deje s de cump lir lo que pro-
Soc. _ No ; m e gustaría más preguntarte a t i, si es t á s met es y di sp ó nte a contestar con br eved ad a la s preguntas .
d isp uesto a co ntesta r. Pue s, por lo que ha dicho, e s pa r a GOR. - Cie r tamente, Sóc rates , algunas contestaciones
m í evidente que Polo se ha ejercitado más en la llamada r eq uie re n mayor a mplitud; no ob sta nte, in t entaré re spon-
r e tó ri ca que en d ial ogar. der con la máxim a brevedad. Precisamente es ésta ta m - e
e POL. - ¿ Po r qué, Só c r a tes? bién una de la s cosas que afirmo: que nadie se ría ca pa z
S óc. _ Po rque a l pregunta rte Que re fonte qué a rte pro- de dec ir las m ismas cosas e n m eno s palab r as qu e yo.
fe sa Go rgias, t ú a labas e st e a rte co mo si a lguien lo ataca- SÚe. - Eso es lo que hace fa lt a . Gorgia s; hazme una
r a , pe ro no r es pon des cuál es . demos tració n de e sto m ismo, de la bre vedad, y deja los
POL. - ¿ Pues no he co nt e s tado que era la más bella ? largo s d iscursos par a ot r a vez .
Soc . _ S in d uda; pero no se te pregunta ba có m o es el GOR. - Así lo h a r é y t endr á s que decir que no ha s oíd o
arte de Gc r gia s , sino cuá l es y qué se deb e llamar a Gor- a na d ie ex presa rse co n mayor c onc is ió n.
gias . Del mi sm o modo que a ntes re spondi ste con e xacti- Soc. - Veamos . Pue sto q ue di c es q ue conoces el a rt e
de la r e tó r ic a y que podría s hacer oradores a otros, d ime d
7 Se gún lo s esc olios, pa rec e ser que es ta frase es tá tomada de u na
ob ra de Po lo, quizá la qu e se ci ta e n 462c; pe ro e > posible q ue Pla tó n ha-
Véa se Odisea I 180.
ya imita d o sola mente su estilo ridicu lizá ndo lo, La tr adu cció n no p ue de
En gr ie go rMt{} r significa a 1" ve>. orador y maes tro de re tóric a.
~eco ge r la as ociac ión de e lemen tos exp res ivos de la frase.
28 Di ÁLOGOS
GORG I AS 29
de q ué se ocupa la retór ica. Por eje m plo. el a r te de teje r Soc. - Por lo men os de los q ue se refieren a las
se ocupa de la fa br icación de los ves t idos; ¿ no es as í? e nfe rmedades.
CORo- Sí. G OR . - Exa c ta me n te.
SOCo- ¿ y la m ús ica de la com pos ici ón de mel od ías ? Soc . - ¿ y la gim nasia no se ocupa ta mb ién de los dis-
COR o- S í. cursos qu e se refieren al buen o mal est ado de los cue rpos?
SOC. - Por He r a !o , Corgtas. que me a dmi r a n tus r es- C O Ro - Desde lu ego.
puestas, pues con testas con in crelb le breveda d. Scc. - Y, po r cierto, también la s demás a rt es , Gorgias,
COR o - Creo, en efec to . Sócra tes, que lo ha go mu y
es tán e n la m ism a situ ació n; cada u na de ella s se ocupa b
acer tada men te. de los d isc urso s que se refieren a s u o bje to.
SOCo- Tie ne s r azón . Ve a m os; co nt és ta me ta m b ié n as í
G OR . - Eso pa rece.
res pec to a la re tór ica; ¿c uá l es el ob je to de s u conoci- Soc. - ¿ Por q ué, e ntonces, no lla mas re tóricas a la s
m ie nto ?
dem ás artes, ya que ta m bién se refi e ren a disc u rs os , si lla -
- COR o - Los discursos.
mas re tó ric a a la que se ocupa de los d isc u rs os?
e Soc. - ¿Qué d iscurso s, Go rg ias ? ¿Acaso los qu e indi- GOR. - Porque se podr ía decir qu e todo el conoc imien-
ca n a los e nfe r mos con qu é rég imen po drían sanar ? _ to de las demás a r tes se refiere a ope rac iones manua les
GOR. -No . y a otras ocupaciones de es t a cl ase; pe ro ni ng una de es-
- SOc o- En tonces la ret óric a no se ref iere a todos los ta s ob ras m anuales es propia de la retórica , sino que en
disc ur sos. ella toda la ac t ivida d y ef icacia se producen por medio de
COR o - Desde luego que no.
la palabra. Por est a cau sa yo estimo que el a rte de la retó- e
__ SOCo- Pe ro , s in emb a rgo.icapaclta a los homb res pa· r ica se ref iere a lo s discursos. y tengo razón , seg ún a firmo .
ra ha bla r. Soc. - No sé s i e n tie ndo bie n q ué c ua lidad q uie res
GOR. -Sí. a t r ibu irle. Pron to vaya sa be r lo con má s clarida d. Ca ntes-
_ Soc. - ¿ Les ca pacita ta m bié n pa ra pe nsar sobre la s ta me: e xis te n a r te s, ¿ no es verdad ?
cuestiones de las que ha b lan ? GOR. - Si.
GOR. - Pu es ¿cómo no ? Soc . - En tre tod a s la s artes, según mi opinión, ha y
45O.:l Soc. - ¿ No es verdad que la medici na, qu e acabamos unas e n la s que la act ivid ad man u a l constituye la pa rt e
de nom brar, h ace a los hom bres ca paces de pe ns a r y ha- pr inci pal y neces it a n poco de la palabra, a lgunas d e ellas
bla r sob re la c u ración de los enfermo s ? no la n ecesit a n e n a bsoluto. sino que po drtan llevar a ca-
GOR. - Necesar iame n te. bo su fu nción e n s ilenc io, como la pintura, la escu lt u ra
Soc. - Luego ta m bién la med ici na, según pa rece, se y o tras muc ha s. Me parece que dices qu e es con es tas con d
oc u pa de los d isc u rso s. la s que no t ie ne relació n la retórica. ¿ No es as l?
GOR. - S í. GOR. - S í. Sócrates; lo compre ndes m uy bie n.
SOC. - Exist e n ot ras q ue ejerce n toda su func ión por
Iv Par ece q ue e ra u na cost u mb re pe rso nal de Sóc ra tes jura r po r He- med io de la palabra y, por as í deci rlo. presc inden de la
ril; a u nqu e ha b itua l, esl e ju ra me n te era prop io de mujere s. Es 1.. dio sa acción total o ca si totalme nte ; po r ejemp lo, la a r -it m ét ic a ,
h ija d e e ra no y esposa d e z eu s.
el cálcu lo, la geome tr ía, las com bin aciones en los juegos
30 DlALOGOS GO RGIA S 31

de azar y otras muchas artes, en algunas de las cuales la mo. a lo par y a lo impar; se dif er encian solamente en que
palabra y la acción son ca si iguales; pero en la mayoría e l cálcu lo e xamina la s r e la cio ne s de cantidad de Jo par y
e s la pa labra la que p redomina e , incluso, solamente por lo impar r espect o a s í mi smos y a unos c on otros. Y si se
e medio de ell a se lleva a ca bo su realización y eficacia. Me me interrogara por la astr o nomía y, al decir yo que tam-
parece que dices que una de é stas es la retórica. bién ésta eje r ce toda su eficacia po r medio de la palabra,
GOR. - Así es. se me preguntara:« ¿Sobre q ué obj eto se aplica e l leng ua-
Soc. - Sin embargo, no c re o q ue quieras dar a ningu- je de la ast ronom ía , Sóc rate s ?", d iría que sobre el cu r so
na de ellas el nombr e de retórica, s i bien literalm ente has de los astros, del so l y de la luna y sobre la r ela ción de
dicho qu e la retóri ca es la qu e a lca nza su efi cacia por me - vel oci da des de unos co n otros.
d io de la palabra, y se podrí a a rgüir, si se quisiera su tili- GOR. - Tu contestac ión sería a ce rtada. Sócrate s .
zar, «¿Luego dices que la aritmética es retórica, Gc r gias? » SOc o- Púes dala tú también, Gorgias. La r etóric a e s d
Pero yo no creo que tú llames r etórica ni a la: aritmética un a de las a r tes que re alizan toda su obra y son e ficaces
ni a la geometría. por medio de la p alabra; ¿es cierto ?
451a GOR. - Crees bien, Sócrates, y com prendes e xac tamen- GOR. - Así e s.
te mi pen samiento. SOC o- Di s obre qué objeto; ¿c uál es, entre to das la s
Sóc . - Ea, comple ta a hora tu r es pues ta a mi Pre- cosas, aquella de la q ue tratan es t os d is cursos de que se
gunta 11. Pue sto que la retó r ica es una de las a r te s q ue s ir ve la r et órica ?
se sirv en preferentemente de la palabra pero hay también - GOR. - Los más importantes y e xcelente s de los asun-
otras en estas c ond ici o ne s , procura decir sobre qué obje- tos h umanos.
to ejer ce su e ficaci a la retórica por medio del lenguaje. SOc o- Pe r o, Gorgias, ta mbién e sa respuesta es discu-
Por ejemplo, si so br e a lguna de la s a rtes de que a hor a ha- tible y ca rece aún de preci sión. Supongo que hab rá s oído e
b la ba, a lguien me preg untara: "Sócrates , ¿qué es la arit- c ant a r en los banq uete s ese escolio 13 en e l que, a l en ume-
b m étíca?». le conte staría, como tú ahora, que es una de las rar los biene s humanos, se di c e qu e lo m ejor es tener sa-
a r tes que produce su efica ci a po r m edio de la palabra. Si. lud; lo segu ndo, ser hernioso, y lo tercero, como di ce el
I I continuando la pregunta, me dijera: «¿Sobre qué objeto ?», poeta del es co lio, adquirir riquezas sin fraude.
le contestaría q ue sobre Jo par y lo impar y la cantidad CORo - Sí, lo he oí do ; pero ¿ po r qué lo ci ta s ahora?
de cada uno. Si nuevamente me p r egun ta r a : «¿ Qué es el Soc. - Porque si, por eje m plo, estuv ieran delante de 45 2a
cálculo ?», le díría que también es una de las artes que ti e- ti los que profesan la s arte s que al abó e l autor del e sco-
ne n toda su eficacia e n la palabra, y si insistiera: «Sobre lio: el méd ico, el m ae s tro de gi m na sia y e l banque ro, y,
qué objeto?" , le r espondería, com o los que r eda c ta n las en prim e r lu gar, di jera el mé dico: «Só c rate s, Corgias te
propuestas en la a samblea, que en cuanto a lo demás es engaña; no es su arte el que procura e l mayor bi en a los
e igual 1I la aritmética que e l c á lcu lo, se refieren a lo mis- ho m br e s, sino el mío ", y yo le pregu nta ra : «¿ Qué eres t u,
It Véase 449d . proposi ció n de la misma persona, para evita r la repe ti ción oe decí a s im-
1I Cuando e n la a samhlell Se proced la a la lectu ra de una proposi_ p leme n te : .10 dem á s co nfor me a est o mismo» (Iá nt en áiía ka/á l á l/u /á).
c ió n d e le y o de un dec reto. se citaba prime ro el nomb re d e su auto r, la l3 El esc ol io era u na canci ó n, gen e ra lme nte d e as u nto moral. q ue se
filia ció n y e l dento al qu e p erten ecí a. S i después se daba lectura a otra can ta b a alfin al d e los ban qu et e s ,
GORGi AS 33
32 DIÁL OG OS

para expr esarte así» , con testar ía p roba blem ent e que mé- de este poder, se rán tus es cl avos el médico y el maes t ro
dico. «¿Qué dices? ¿El producto de t u arte e s el mayor de gimnas ia, y en cuanto a ese ban qu er o, se verá que no
b ien? » «¿Cómo no, S ócrates Z, d iría quizá. ¿Hay a lgú n bie n ha adqu irido la r iqueza pa ra sí mismo, s ino pa ra ot ro, pa-
b mayor pa ra el ho mbre que la sa lud?» Si despué s de éste, ra t i, que eres cap az de ha b la r y pe rsuadir a la mu lti t ud.
el maestro de gimnasia dije ra: «Tamb ién a mí me ea us a- SÓC. - Me parece, Gorgia s, que a hora ha s e xpuesto ca- 45 3a
ria sor p resa, Sócrates, que Gorgias pudiera demos trarte si con exactitud lo que, según tú , es la retórica; y si te he
que su arte produce un bien ma yor que el mío» ; igualmen- entendido bien, dices qu e es a rtífice de la pe rsuasió n y que
te preguntaría yo a éste: «¿Qué eres, am igo, y qué obra toda su activ idad y el corona mien to de su obra ac aban en
rea lizas ?» «Ma estro de gim n as ia, diría, y mi obra cons is- esto . ¿Puedes decir que su potencia se ex tiende a m ás qu e
te e n dar a los cuerpos fuer za y belleza.» Después del maes- a pro ducir la persuas ión en el á ni mo de los oyentes ?
t r o de gimnasia, el banquero, con gra n de sprecio pa ra to- GOR. - A nada más, Sócrates; me parece que la has de-
e do s los demás. se gún yo c reo, di r ía: «Exa mina , Sócrates, fi nido suficien temente; és te es, en efecto, s u objeto
si e ncuent ras en Gorgia s o en c ual quier ot ro un b ien ma- fu nda me nt al.
yo rque la rlqueaa.» Le d iríamos: «E s que tú eres el a rtífi- Soc . - Escucha, pues, Go rgias. Es preciso, sin duda,
ce de la r ique za ?» Contestaría afirmativament e.«¿Qué que se pas que si hay alg uien que al di aloga r quiera cono- b
ercs ?» «Banquero.» «¿Cr ees que el mayor bien para los cer exactam ente el ob jet o sobre el que se discute, yo es -
hom bres es la r-iqueza ?» «¿Cómo no ?», responde ría. Nos- toy pe rsuadido de que soy un o de ellos. Cre o que tú tam-
otros le d iríamos: «Pues aquí tienes a Gorgias que afir- bi én eres así.
ma, co ntra lo que tú dices, qu e su arte es causa de un bien GOR. - ¿Po r qué lo di ces , Só c rates?
mayor que el tuyo.» E s evidente que después de t al afir- Soc. - Voy a e xplica r telo. Debo advertirte que yo no
d mación él p re guntaría: «¿Qué bien es ése ? Que contest e sé claramente cuá l es, en re alidad, la persuasión que, se-
Gc r gias ». Pu es bien, Gorgias, piensa que ellos y yo te ha - gún tú, produce la retórica, ni sobre qué objeto s, a un que
cemos esta pregunta y con t éstanos: ¿Cu ál es ese b ien qu e, s?specho a qué pe rsuasión te refie res y sobre qu é. No obs-
según dices, es el mayor pa ra los hombres y del que tú ta nt e, vaya preguntarte qué cl ase de pers ua s ión p rodu-
eres artífice? ce, a tu juicio, la retórica y sobre qu é cosas. ¿Por qué, su - e
...- GOR. - El que, en realidad, Sóc ra tes, es el mayor b ien; poniéndolo, te inte rrogo en lugar de deci rl o yo mismo?
y les procura la libertad y, a la vez pe r mite a cada u no No es po r t i, sino por nuestra conversación , para que avan-
dominar a los demás en s u propia ciudad. ce de modo que nos aclare todo lo posible el ob jeto sobr e
Soc . - ¿Qué quie re s decir? el qu e discu timos. Examin a si te parece jus to mi mo do
e GOR . _ Ser ca paz de persuadir, po r medio de la pa la- de interrogar; por eje mp lo: si te hubiera p reguntado qué
bra, a los juec es en el tribuna l, a los cons eje r os en el Con- pintor es Zeuxis 15 y me hubieras conte st ado qu e es pin-
sej o, a l pueblo en la Asamble a y en toda ot ra reunión en
qu e se t rate de a suntos p úb licos 14. En efec to, en vi r tud p rendid a de este mo do es lá al ma rgen de la jus t icia . Por u n há bil force -
jeo dia lectico, Sóc rat es le lleva a d ecir qu e la p er suasión qu e produ ce
" Desp ués de mu ch a s vacilac ion"s, Gorgia s defin e la retórica c()mo la re tó r ica es . preci sa men te , sobre lo ju s to y lo inju st o.
el arte de la pe rsu asió n; p er o en s u s pa lab ras se manifie sta la tend"ncia " zecxrs, p tmo r que gozó de gran c ele br idad , citad o po r nu me ro -
de la pu ra ut il idad para el ora dor y s" deja ver qu e una orato ria com- sos tes timon ios. Su p eri odo de act ividad se coloca ent re 435 y 390.
M. -3
34 DIÁLOGO S GORG I¡\ S 3S
ter de a nima les , ¿ no te nd r ía razón e n volver a pregu n· Soc . - Puesto que no es la única que produce este efec-
tar qu é cl ase de a n ima les pin ta y de qu é modo ? 1IJ, sino que ta m bién ot ras lo prod ucen, es ta r ía just if ica-
C O Ro - Sin dud a . do , como e n el caso del p intor, que a l llegar a este p u nto
d S oc. - ¿Acaso porque también hay o tros p in to re s q ue s ig ui éra mos pregu nt a ndo a nu es tro int e rloc ut or: _¿Qué
pi nta n o tras mu chas especi es de a nimales ? pe rs uasión p roduce la ret órica y sobre qué obje to ?» ¿ No b
COk. - Sí. le parece ju stificad a esta nu eva pregunta ?
SÓc. - Pe ro s i só lo z e u x¡s los p inta ra. ¿ no h u biera s i- GOR. - Sí me lo pa rece .
do perfec ta t u contes tació n? SOco- Pues cont ést ala, Go r gia s, ya qu e tambié n a ti
COR o - Evide n te m e nte. le parece as í.
Soc. - Pu e s d i ta m bi én , res pecto a la re tó r ica , s i t ú GOR. - Yo me refiero, Sóc rates, a la persu as ión que
c rees que só lo e lla produce la pe rsua sión o ta mbién la pro- se pro d uce e n los trib una les y e n otras asa m b leas, según
du cen ot ra s a r te s. Qu ie ro decir q ue s i el que enseña c ua l- dec ía hace u n mo me n to, so bre lo que es j us to e injusto.
q uier cosa cons igue conve nc e r de lo que e nseña o no. SOc o- Ya s uponía yo q ue era ésta y so bre esto la pe ro
GOR. - S í que convence, Sócr a te s, y m á s q ue nadie. sua slón de que tú querías ha bla r, Gorgias; pe ro te he in -
, Soc . - Vo lvamo s de nuevo a las misma s artes d e que te r rogado a [in de que no te cause ex t rañeza a unque a con-
a ho ra ha blábamos l.; ¿ no nos en señan la aritmét ica y el tinuación te pregu n te algo que pa rece evidente y. sin em -
maes tro de ella todo lo q ue tiene rel a c ión con el nú me ro ? burgo, in si st a yo sobre ell o. Re pit o que lo h ago as! no por e
GOR. - Desd e luego. ti, sino pa ra que la dis cusión lleg ue a su te rmino o rdena-
SOco- ¿ No nos conve ncen también ? da me nte y no nos acostum bremos a a n t icipa r, por me ras
GOR. - SI. co nje tu ras. los pe n sam ient os del ot ro, y, asi mismo-pa ra
_ SOco- Así pue s, ta m bi én la a r u m ét ica es a rt ífice de que pueda s desarro llar has ta el fi n tu pe nsam iento como
la pe rs uasión . quie ras. con a r reglo a tus propias id eas.
GOR. - Eso pa rece . GOR. - Me pa rec e m uy bi e n tu p rocedimiento ,
Soc. - y s i se nos pregunta de qué persuasió n y so- Sóc ra tes.
bre qu é obje to, responde re mos probab lemente que de un a SOe. - Cont inuemos; va mo s a exam ina r lo sig u ie nt e:
pe rsuas ión d idá ct ica res pec to a los núm e ro s par e im par ¿ Exis te al go a lo qu e tú lla mes sa be r ?
454Q y a s u cant idad . Ta mbié n po d re mos de mo s trar que tod a s GOR. - SI.
las de más a r tes de q ue a hora ha blá bamo s son a r tífices de SOco- ¿ Y a lgo a lo qu e llames c r-eer?
la pe rsua sión e indi ca r de qu é pe rsuas ión y el ob jet o a que GaR. - Ta mb ié n.
és ta se refie re; ¿ no e s así ? Soc. -¿ Te parece qu e sab e r y c reer son lo mi sm o o d
GOR . - Si. que son algo dist into el con oc im ien to y la c reencia ?
.-- SOco- En to nces la re tór ic a no es el único artífice de GOR. - Creo qu e son alg o di stinto, Sócrates.
la pe rsuasión. soc. - AsI es ; lo com p robarás por lo s igu ient e. Si te
GOR. - Es cierto. preguntaran: «¿ Hay una creencia fal s a y otra ve rd ade ra,
Gor gia s ?.., con test a r ía s afi r mativamente, c re o yo.
" Véa se 45 111. GOR. - Si.
I

36 D IÁLOGO S GORGIAS 37
Sóc . - Pero ¿e xist e una ciencia fal sa y otra ve rdadera ? c uando se t rat e de la cons t ru cción de mu ra lla s o de l es ta -
CO R o - En mod o alg uno . blccimie nto de puer tos o a rsenales. porq ue en tonce s lo da-
5 6c . - Luego es ev ide nt e q ue no so n lo mism o. rón los a rqui tec tos. Menos a ú n cuando se delibere sobre
COR o - Es ci erto. la elecc ión de gene rales , so bre el or de n de ba talla co nt ra
e SOCo- S in em ba rgo , los que han adq u ir ido un co no- los e ne migos o so bre la capt u ra de a lgú n pue s to; e n este e
cimiento y los que tiene n u na c reencia est á n igua lmen te caso serán los expe rt os en la gue r ra los q ue dará n s u con-
persuad idos. scjo, y no los o radores, ¿Qué d ices a esto, Co rgia s ? Pues-
COk. - Así es. 111 q ue a firmas que t ú. eres o rador y ca pa z de hace r ora-
SOCo- Si te pa rece, es ta blezca mos. pues, dos cl ases de llo res a otros, con vien e con oce r de t i lo conce rn ient e a t u
pe rsuas ión: una qu e p roduc e la creenc ia s in el sa be r: o tra une. Pie nsa qu e aho ra yo me preoc upo po r t us int ereses,
q ue o rigina la cíenc ta. pues quizá al gu nos de los presentes desea ser tu di sc tpu-
GOR. - De ac ue r do. lo - su pongo que incl uso son m uchos- , pero tal ve z no
SOCo - ¿C uál es, e ntonces, la persuasión a que d a lu- !>c atreve n a inter roga r te. Así pu es, cons ide ra, a l se r pre-
gar la re tó r ica e n lo s tribun ales y en las otras asa m b leas guntadc po r mi, q ue son t a m bié n ellos los que te pregun- d
respecto a lo justo y lo inju st o ? ¿ Aquella de la que nace tu n: _¿Qué provec ho o btendremo s, Gorgtas. s i seg u imos
la creencia sin el sa be r o la que produce el saber? tus lecciones? ¿Sob re qué a sun to s se remos ca paces de
C OR o - Es evidente. Sócrates, que aquella de la que na- aconsejar a la ciudad? ¿Só lo sob re lo justo y lo inj us to o
ce la c reencia. tnm bi én so bre lo que ahora dec ía Sóc ra tes?« Así pues, pro-
4 550. Soc. - luego la re tó r ica , según parece, es artífice de l u ra darles una cont es tación.
la persuasión qu e da lugar a la c reencia. pero no a la en- GoJ!.. - Pues bien. va y a intentar. Sóc rates, descubr -ir-
señ a nza sob re lo ju sto y lo injusto. , h' con cl a r idad toda la po te ncia de la ret óri ca; t ú mismo
GOR. - S i. lile has indicado el ca mino perfectamen te. Sa bes, segú n
Soc. - Luego tam poco el o ra do r es in struct or de los t reo , q ue est os a rse nales, es tas mura lla s de Ate na s y la e

t ribunal es y de las demás as am bleas sob re lo justo y lo t oustruccí ón de los pu ertos proceden, en parte, de los con-

inju sto. s ino q ue ún icame nt e les pe rsuade. En efecto, no eejos de Te m ts toc les 17, en pa rt e , de lo s de Pe r tcles. pero
podrla ins t r u ir e n poco tie m po a ta nta m ult it ud sobre nu de los ex pe r tos e n est as obras.
c uest iones de tan gra n imp orta nc ia . soc. - Eso es, Gorgias, lo qu e se d ice respec to a Te-
COR, - Cla ro que no. uu stocles: e n c ua nt o a Pericl es, yo mi sm o le he 01 ..10 c ua n-
Soc. - Veamos, pu es, lo que realmente esta mos d ícíen- du 1I0 S ac onseja ba la con st r uc ción de la mu rall a inter-
b do res pe ct o a la re tó ri ca, porque n i yo m ism o pue do ha- nrcd ¡a ".
ce r me una id ea cl a ra de lo qu e d igo. Cuando en la ciudad
11 Dt'$pul's d e las Guerra s Médic a s lo s ate n ienses, po r consejo d e Te-
se cele b ra una asamblea para elegir m édicos o construc- lI11 slucle 5, fo rt ifica ron su d ud a d y el puerto d..! Pirro, t ras lad ando 8
tores de na ves o cu alqu ie r ot ra c la se de a rt esa no s, ¿no es " .t,· lu, arsenales del Pale ro, el otro puerto d e Ate na s,
cierto qu e, en esa ocasión, el orado r no deb e rá dar su opi o .0 Dos murall a s iban de la d udad has ta..! Pirco, o tra te rce ra i ba .. 1
nión ? Porqu e es evide n te que en cada el ección se de be pre- 1,¡J " m , El mu ro d e q ue aquí habla Platón se llamaba mu ro del Su r o In·

fe r ir al más há bil en su oficio, Ta mp oco dará su consejo nuor. pue s que da ba e ntre e l de l No rte o Ex terio r y e l q ue con duela .. 1
hol.·w ,
, r

38 DIÁLO GOS GORG1A S 39

456/ol GOR. - Y ob servarás. Sócrates, que, c uando se trata alguno de s us pa rie ntes o amigos, no se debe por ello od iar e
de e legir a las pe rsonas de que ha b la ba s a hora. so n lo s ni des te rra r a los maes tros de gim nasia y de esg r ima. Es-
o radores los que d an su conse jo y hacen prevalece r su opio tos les han enseñado s us arte s con int e nción de que la s
nión so bre estos asuntos. em plea ran ju stament e con t ra los e nemigos l' y los malhe.
Soc . - Por la admiración que ello me produce. Go r- chores. en defensa propia , sin inici a r el a taque ; pe ro lo s
gias . hace tiempo que ve ngo preguntándote cuál es , en rea- discípu los , tergiver sando este propó sito, usan mal de la 457 a
Iidad, el pode r de la retóri ca . Al cons ider a rl o as í, me pa- superi ori dad que les procura el a r te . En es te caso los
rece de una grandeza m aravill osa . maestros no son malvados, ni su a r te es por ello culpable
CORo_ Si lo sup ieras tod o. Sóc rates, verlas que , po r ni perversa, s ino, e n m i opinión, lo son los que no se sir-
asl de cir lo, a braza y ti e ne bajo su domi n io la poten ci a de ve n de e lla rect amente.
b rod as las a r tes. Voy a da rt e una pr ue ba convincente. Me El m is mo razo na mi ento s e a plica ta m bién a la re t órt -
ha suced ido ya m uc ha s veces que, acom pa ña nd o a m i he r- ca. En efec to, el orador es ca pa z de hablar cont ra toda cl a-
ma no y a ot ros médico s a cas a de uno d e es os e nfe rmos se de personas y sobre todas la s c ue st iones, ha sta el pun-
qu e no qu ieren t oma r la medicina o confia rse al médico lo de producir en la m u lt it ud mayor pe rsuasión que sus
para una operación o ca ut eri zaci ón , c ua ndo el médico no adve rsa r ios sob re lo que él quiera; pero es ta ven ta ja no b
po día co nven ce rl e, yo lo cons eguí sin otro auxilio qu e el le au toriza a privar de su reputaci ón a los médicos ni a
de la retórica . Si un médico y un orador van a c ualqu ie r los de ot ras profesiones, so lamente por el he cho de ser ca -
ci udad y se entab la u n debate e n la as a m ble a o en al guna pa z de ha ce r lo, sino que la retórica, como los demás me-
ot ra r eunión sob re c uá l-de los do s ha de se r elegid o co mo d ios de lucha, se debe emplear también con jus ti cia. Se-
e méd ico, yo te asegu ro que no se ha rá n ingun ca so del mé- gún c reo yo , s i alguien adquiere habilidad en la oratoria
d ico, y que , si él lo qu ie re, se rá elegido el o rador . Del mi s- y, aprov echa ndo la potencia de es te a rte, obra Inj ustamen-
mo modo, frente a otro a r tesan o cua lquie ra, el orador con- te, no por e llo se debe od ia r ni dest errar al que le ins tru-
segu id a qu e se le eligiera con p refe renci a a ot ro, pu es no yó: éste tran smitió s u arte para un e m pleo jus to, y el di s- e
hay ma te ria sob re la qu e no pueda habla r a nte la m ult i- ci pu lo lo utiliza con el fin contrar io. Asl pu es , es de justi-
tu d con m ás pe rs ua sión q ue otro al gu no, cu alqu iera que cia od ia r, de st erra r o conde nar a m u er te a l q ue h ace mal
se a la profesión de és te. uso, pero no al m ae st ro .
Ta l es la potencia de la retór ica y hasta tal punto a l- SOC . - Supongo , Ocrgta s. qu e tú tamb ié n tie nes la ex-
ca nza; no obs tante, Sóc rates , es preci so ut ilizar la ret ó ri- per ienci a de nume rosas di scu sion es y qu e has observado
d ca del mis mo modo que los de má s medi os de com ba te. Por en ellas que di fíci lmente cons iguen los interlocuto res p re-
el hecho de ha be rl os a p re nd ido , no se deben usa r cont ra cisa r el objeto sob re el que intenta n di al oga r y, de est e
tod o el m undo ind isti nta me nte; el ha be r prac t icado el pu- modo, po ne r fi n a la re u nión después de ha ber recogido
gila to, la luc ha o la esgrima, de modo que se pueda ven-
,. GOr(¡; ia s ex po ne aqu i la mo ra l de s u época, que co nsis te en ha ce r
cc r a a migos y e nem igos, no a uto r iza a go lpea r, herir o
b ie n a l a m igo y ma l a l e ne m igo. Pla tó n se o po ne a e lla afirma ndo q ue
mat a r a los amigos. Pero tam poco, por Zeus, s i alguno que l·n ningú n c a so se d ebe h ace r ma l a nad ie. Véa se R ep. 33S-36; en /ó" 49b-
ha frecuent ado la palestra y ha consegu ido robu st ez y ha- c. Pero a vece s, en p u ra di a lé ctic a, pon e en boc a d e Só cra tes e sta s m is-
bil idad en el p ug ilato golpea a su padre, a su madre o a lilas idea •. Véa se 480e, 481 b.
, '

40 DIÁ LOGOS GORGIAS 41

d Yex pre sado r ecípro ca me nt e sus pe nsamientos . Por e l con- quizá nos exten damos demasiado. Así pues, es p reciso con - e
t rarío, si hay diferencia de op in iones y u no de ellos afir- sulta rles. no sea qu e re tengamos a alguien que quie ra aten -
ma qu e el ot ro no ha bla co n exactitud o cl aridad, se ir r i- der a otra cosa.
t a n y se im aginan que se les contradice con mala in ten- QUER. _ Ya oís, Gorgias y Sócrates, el clamor de tod os
ció n, y as í disput an por amor p ropio s in ex a mina r el ob - és tos, que desea n oí r os si cont inuáis; en c ua nto a mí, oja-
je to p ropu esto en la d isc us ión . Algu no s te rmin an por se- lá no se me presente una ocupación t a n impe riosa que m e
para r se de m anera vergonzosa, después de in juriarse y ha - ob ligue a a bando nar con versaci one s de tanta importan-
be r dic ho y oído tan ta s ofensas que hasta los asistentes cia y lle vadas de tal modo pa ra dar p referencia a otro
se ind igna n co nsigo m ismos por haber se pre stado a esc u- asun to.
e c har a ta les person a s. ¿ Po r qué d igo esto? Po r q u e a h ora C AL. - Po r los dioses, Que refonte, también yo me he
me pa rece que t us pa labras no son con se c ue nt es n i están encont rado e n muchas disc us iones y no sé si algu na vez
de acuerdo con las que dijiste a l principio sobre la ret óri- he sent ido ta nto p lacer como ahora; por con siguiente, me
ca . Sin emba r go, no me decido a refutarle t emie ndo que da réis gran s a tisfac ción , aunque estéi s dispuestos a con-
s upongas que ha blo por r ivalidad contra t i y no por el de- ver sa r duran te todo el día .
seo de esclarecer el objeto de nues tra discusión. Po r tan- S Oco- Por mi pa rt e, Calícl e s . no hay inconven iente, s i
458a too si tú eres de l mismo tipo de hombre qu e yo soy. te in - Gorgias consiente en ello.
te rrogaré con gus to; si no. lo deja ré. ¿Qué clase de hom- G OR. - En esta s it uación, Sócrates, res ult a ya vergon-
bre soy yo? Soy de aquello s que aceptan gustosamente que zoso qu e no acepte; tanto m ás cuanto qu e yo mismo me
se les ref ute, s i no dicen la verdad. y de los que refuta n he of recido espontáneamente a que cada uno me p regun-
con gus to a su in terl oc utor , s i yerra; pero que prefie ren te lo qu e quiera. Así pues, sí le s parece bien a los pres en - e
se r refutados a r efu t ar a otro, p ues pienso que lo prime- tes , con tin úa la conve rsaci ón e Inte rroga lo que desees .
ro es un bien mayor, po r cuanto va le más lib ra rse del peor SOc o- Es cucha, Gorgias, lo que me ca us a-ex tr a ñeza
de los ma les que librar a otro; porque c reo que no existe en t us palabras; quizá has hablado rec tamen te , pero yo
mal ta n grave como una op inió n errónea sob re el tema que no te comp rendo bien. ¿Afirmas que eres capaz de ense -
b a hora discutimos 1". Po r [o ta nto, s i dices que también tú ña r la retórica al que qu ie ra ser tu discípulo?
e res así, contin uemos; pero si c rees que conviene de jar la GOR. - Si.
conversaci ón, dejémosla ya y pongámosle fin . soc. - ¿De ma nera que sobre tod os los objetos produz-
GOR. - Te aseguro, Sócrates, que también soy d e la ca convicci ón en la m ulti t u d, persuadíéndola s in ins -
mi sma mane ra de se r que t ú indicas; s in embargo. quizá trui rl a?
convin iera tene r en c ue n ta el in te rés de los que aquí es- GOR. - Exactamente.
tá n , po rque ya antes de llega r vosotros había yo diserta- S Oco _ Decías h ace un momento 21 que inclu so sobre 459 a
do a mp liamente, y si ahora continuamos la conversación, la sa lud el o rador se rá m ás persuasivo que el médico.
GOR. - Sí que lo dec ía, pero sólo ante la mul ti tud .
1" ' En la discu sión, Só crates repite a sus interlocu tores est a fras e
frecuen te men te y e n variad a s fo rmas (472e, SOOe). En ella ve mos qut' Un
SOe. - Deci r a n te la multitud , ¿ no es decir an te los ig-
mal tan gra ve no p uede s er u na opi n ión errónea sob re la re tÓrica co rno
si mp le a r te. 1] Véas e 4S6b .
42 DlALOGOS GO RG I AS 43

norant es ? Pues, sin d uda. an te los que sa be n no pue de ser aparecer a nte los ign orantes como más sabio qu e el que
el ora do r más pe r suasi vo que el m édico. rea lmente sabe, a unq ue él no se pa? ¿O bie n es ne ce sario e
CO Ro - Es verda d . que quien ti e ne el p ro pós ito de apre nder la retó rica pa-
Soc . - y si es más persuasivo q ue el m éd ico r esulta se a es tos conoci m ien tos y los ha ya adqu ir ido a ntes de d i-
m ás persuasivo qu e el q ue sabe. rigirse a ti? Y e n caso co nt ra r io, tú , que e res maest ro de
Gme - Así es. re tó r ica, ¿ prescindirás de en señar a tu discípu lo es to, Por-
b 56c . - Sin se r m é di co, ¿no es ciert o ? que no es función tuya , y ha rás que a nte la m ult itud pa-
GOR. -Sí. rezca q ue lo sa be , cuando lo igno ra, y q ue pa se po r bueno
56c. - E l qu e no es médico es ignora nte. y el méd ico sin se rl o? ¿O te se rá comple ta mente im po si b le e nse ña rl e
s a be. la re tórica, s i previamente no conoce la verdad sob re es-
GOR. - Es e vidente. las materias ? ¿Cómo es esto, Gorgias ? Por Zeus, como ha s
s oc. - Luego ante ignorant es e l que no sa be se rá más d icho a n tes, descub re nos el poder de la retórica y e xplt- 460a
pe rsuas ivo que e l que sabe. puest o qu e el orador a ven ta- canos en qué cons is te.
ja a l m éd ico . ¿ Resu lt a es to o no ? GOR. - Yo creo, Sócra tes, que, s i ac aso las descono-
GOR. - En este caso, al menos, si resulta. ce, las a p re nde rá tam bié n de m i.
56c . - Y respect o de todas la s otras a r tes, se encu en- Soc . - No s igas ; tu contes tación 'e s suficiente. Si ha s
t ra en la mi sma sit uació n el orador y la re tórica . No ne- de hacer orador a alguien, es preci so que co nozca lo j us-
cesita conoce r Jos objet os en sí mi smos, sino ha ber inven- to y lo inj u sto , bie n lo se pa a ntes de recibir tu s lecciones
e tado c ierto pro ced imie nto de pe rs ua s ión que, a n te los ig- o bie n lo a pr e nda co nt igo.
nora nt es, le haga parecer más sa bio qu e los qu e rea lmen- GOR. - Exac ta mente.
te sa ben. Soco- ¿Pero qu é ? El que ha a p rendido la construcción b
GOR. - ¿ y no es un a gra n como d ida d, Sócrat es, que, es co ns t ruc tor, ¿ no es as í ?
s in a prende r las demás a rtes, con ésta so la e l orador no GOR. - Sí.
res u lte infe ri or a los q ue la s profe san ? Soc. -¿El qu e ha a prendido la m ús ica es m ús ico ?
Soc . - Si el o rador, po r ser a sí, ave ntaja o no a los de CORo- Sí, lo es.
otras p r ofes ion es, lo exa min a remos en seguida 11, s i en S6c. - ¿ y el que ha aprendido medicina es médico ?
algo int eresa a nuest ra discus ión; pero a hora debemos exa- ¿ y en la misma relación, las dem ás artes , de modo que
mina r e n pr imer lugar lo sigu ien te . ¿ Respecto a lo justo el que a pren de un a de és ta s adquiere la c ua lida d que le
d y lo inju st o, lo be llo y lo feo, lo bu eno y lo malo, el cono- proporciona s u conocim iento?
cedor de la re tór ica se e ncue nt ra e n la m is ma s it ua ción CORo- Sin d uda.
q ue respecto a la sal ud y a los o bje tos de la s otra s a r tes, Soc. - Sig ui endo el m is mo razonamiento, el q ue co-
y, desconociendo en ell as qué es bueno o malo, qu é es be- no ce lo ju sto. ¿ no es jus to?
lio o feo y qué es jus to o injus to, se ha procu rad o sob re GOR. - Ind uda bl emente.
esta s c ues tiones un medi o de persuas ió n que le pe r m ite Soc. - y el j us to obra jus tamen te .
GOR. - Si.
21 v éase 466 a .
44 DIÁ LOGOS GORGIAS 45

e Sóc. - Por co nsigu iente, ¿oo es preciso que el o rador ble que el orador ha ga uso injusto de la retórica y que quie-
sea jus to y que el just o desee obra r con justicia? ra o bra r injust am en t e. Por el perro . Gorgias, no es c osa
COR o - Así p arece. de una breve conversación el aclarar s uficientemente có- b
S éc . - Luego ja más querrá el or ador obrar in just a- mo es esto en reali dad.
mente. POL. - ¿ Qu é dices . Sócrates? ¿Tu opinión sobre la re-
C OR o - Parece qu e no. tórica es la que acabas de e xpresar? ¿Crees que puedes
Soc. - ¿ Te acuerdas de que hace poco decías lJ que sustentarla porque Gorgias ha ya se ntido vergüenza en
d no se de be acusar n i des terrar a los maestros de gimna- concede rte que e l orador no c onoce lo jus to, lo bell o y lo
s ia e n el caso de que un púgil se sir va in justamente de su bu.epo, y ha ya añadido a continuación q ue enseñaría es to
arte, y qu e, del mism o modo, s i un orador se s irve de la al d iscípulo que se le presentara sin conoce r esto? Y q ui-
ret órica pa ra un fin inj us to, tampoco se de be ac usar ni zá a consecuencia de esta concesión, se ha producido cier-
exp u lsar de la ci udad a su maestro, sino al que ob ra in- ta corrtr'adicció n; es to es lo q ue te del eita , y tú m ismo c on -
justamente y hace un uso in de bido de este a r te? ¿D ijis te duces la d iscus ión a seme jantes argucias ... ; pero " e
esto o no ? ¿q u ién se rá capaz de nega r qu e conoce la jus ticia y que
CORo- S í, lo di je. puede enseñarla a los dem á s ? Lleva r la conversación a ta-
Soc. - Pero ahora result a que este mi s mo orador ja- les extremos es una gran rust icidad.
m á s obrar ía inj u st am en te . ¿No es ve r d a d ? Sóc . - Encantador Po lo . precisamente te nemos ami-
C ORo - Así parece. gos e hij os para que , c uando nos ha ce mos viejo s y damos
Soc . - Al comenza r es ta conve rsación l" se di jo que la algún pa so e n fal so, voso t ros lo s jóvenes , es tando a n ues-
retó rica no t rataba de los discursos sobre el n úme ro par tro lado, rectifiquéis nue st ra vi da en la s acciones y en la s
y el impar, s ino de los r ef e r en te s a lo jus to y lo inj u s to: palabras. Así a hora, si Go r gia s y yo hemos cometido al- d
¿es a sí ? gú n erro r en la discusión, re ct ifíc alo tú q ue es tás aquí; es
G OR. - Así es. tu obliga ción; por m i par te. estoy d is puesto a plantear de
Soc. - Al oírte dec ir esto co ncebí la ide a de que la re- nuevo lo q ue tú q uieras, si crees que a lgo de lo q ue hemos
tórica no podía ser n un c a algo inj usto, puesto que s us dis- convenido no está bien, con ta l de que cumplas una sola
cursos t r a ta n s iempre sobre la justic ia; cuando poco de s- condición.
pués dij is te que el orador podía también e mplear su a r te POI.. - ¿ y qu é es ell o?
46 la in justamente, entonces, sorp rendid o y considerando que Soc. - Reprimir, Pol o, e l afán de p ronu nciar largos
no habí a concorda ncia en tus pa la br as. dije aquello de que, discu rsos, co mo in tenta st e hacer al principio de esta
s i tú estabas de acue r do conmigo en q ue es prove ch oso conversación.
se r r efu ta do. era convenie nte seguir la co nversació n; en POL. - ¿ Pe r o qué ? ¿No se me permitirá de cir tod o lo
el caso cont rario, abandonarla. De spué s, al examinar la que quiera ?
cuestió n, t ú m is mo ve s q ue de nu evo nos re su lt a im po si-
as Polo entra e n la d isc usión con u n Irnpetu y una vehe mencia q ue
1J Véase 456d . se manifiest a n en la forma de la fr as e. Esta se hall a. en efecto, lle na de
l. Véase 454b. anacolutos y cortes que la trad ucci ón tra ta de re flejar en lo posible .
oÍ i

46 DIÁLOGOS GORG IAS 47


e Soco- Sufrirías un gran daño, excelen te Po lo, si ha- SOl.:. - Pero, Polo, ¿ te has informado ya por m is pa la- d
biendo venido a Atenas, e l lugar de Gr e cia donde hay ma- hr a s de lo que yo di go que e s la retó rica co m o p ara se -
yor li bertad para hablar, sólo tú aq uí fu eras privado de gu ir m e preguntando si m e par ece bella?
ell a. Pe ro conside ra e l caso co ntr a r io: si tú pronuncias lar- P O Lo - Pero ¿no sé~ que ha s dicho que es un a especie
gos disc u r sos s in quer er responder a lo que te pregunte, de práctic a ?
¿no sufrir é yo un gra n da ño s i no se me permite marchar- Soco - Puesto q ue estimas el c a u sa r a g r ado, ¿ quie r e s
462a m e y dej ar de e scucharte ? Si tienes Interés en la cuestión proc u r a r me uno, aunque sea pequeño?
que hemos trata d o y quie r es r e ctificarla, pon de nuevo a POL. - Sí quiero.
d isc u sión, como acabo de decir, lo que te parezca; pregun- SÓc. - Pregúntame, e ntonce s, qué arte es la culinaria,
ta y conte s t a alterna tivamente, como Go rg ia s y yo; refú- en m i opinió n.
tame y permite que te r efute. Tú afi r m a s , sin duda , que POL. - Te lo pregunto, ¿qué a r te es la cu lina r ia ?
sa bes tanto com o Gorgi a s , ¿no es a sl? SÓc. - N.!!1guna, Po lo .
POL. - SI. POL. - Pues ¿ qué es? Dil o.
SÓC . - AsI pue s, ¿ ta mbién tú invitas a que c a da uno S Óc. - Un a especie de práct ic a.
t e pr egunte lo q ue quier a porque es t ás seg ur o de que sa- POL. - ¿ De qué? Habla.
be s contestar ? Soc : - Vay a decí r te lo: u na prácti ca de producir a gra- e
POL. - De sd e lu ego. do y place r, Polo.
b So c o- Pues haz lo que p re fie r a s; pregunta o responde. POL. - Lu ego, ¿ son lo mi smo la culina ria y la re tórica ?
POL. - Eso vaya hacer. Conte sta , Só crate s, qué e s la Soc. - De n in gún m odo, pero son parte de la m isma
retórica en tu opinión, puesto que 'c r ee s que Gorgia s tie- ac ti vida d.
ne di ficulta d para definirla . POLo - ¿A qué a ctividad te re fie r es?
Soc . - ¿ Me pr eguntas qué a rte e s, a mi juicio? SÓc. - Temo que s ea un poco n ido decir la verda d; no
POL. - Exa ct a m ent e. lile decldc-ehacerlo por Gorgias, no sea qu e piense que
Soc. - Ning una, Polo, s i he de decirte la ve rdad . yo ri d ic u l.izo s ll.fr ofe sión . Yo no sé s i es é sta la retó ri ca 463a
POL. - ¿ Pue s qué e s la r etórica s egún tú? que practica Gorgia s, pues de la discusión ante rior no se
Soc. - Algo que tú afirmas haber hecho arte en un es - pue de deducir cla~amente lo que él pi ensa; lo que yo lla-
e c ri to que he le íd o hace po co 2", mo retórica es una pa r te de algo que no tiene nada de
POL. - ¿ Qué es , e ntonces ? he lio.
S Óc. - Una especie de prá ctica. GOR. - ¿De qué, Sócr a tes? Dilo y no ten ga s reparo po r
POLo- ¿Según t ú , la r etórica es una práctica ? mí.
SÓc . - E so p ien so, a no ser que tú digas otra cosa . Sóc . - Me parece, Gorgi as, que e xiste cier ta ocupación
POLo- Una práctica ¿d e qué? que no tiene nada de a rt e , pero que ex ige un esp íritu sa -
Soc. - De producir cierto agrado y placer . guz. decidido y apto por natura leza para la s r ela ciones hu -
POL. - Así pues , ¿crees que la retó r ic a es al go _bello, ma nas: llamo adula ción a lo fundam ental de ella. Hay, se - b
puesto q ue es capaz de ag r a da r a los hombres? gún yo creo, otras m uchas parte s. de é sta; un a, la c oci na,
l. Véase nota en 448c . que parec e arte, pero que no lo es, e n mi opinión, sino una
48 DIÁl.OGOS G ORGIAS 49
prác t ica y una r u tin a. Tambié n lla m o parte de la ad ula- m ente a lguien qu e no sea m é dico o m a estro de gimnasia
ción a la re tó r ica , la c osmética y la so fís tica, c ua t ro par- pu ed e per cibir qu e no es buena .
tes que se a plic a n a cuatro o bjetos. Po r tanto, s i Po lo quie- GOR. - Tienes r azón.
e re inte r roga rme. qu e lo haga. pue s aún no ha llega do a sa- SOCo- Dígo que est a falsa aparíencia se encue ntra en
ber q ue parte de la adu la ción es , a m i jui ci o, la r et órica ; el c ue r po y en e l al ma, y ha ce que un o y o tra produzc an
no ha adve rt ido que aún no he co ntestado y, sin embargo, la impresión de un est ad o sal udable que e n realida d no b
sigue pregun tá ndom e si no c re o que es a lgo bello. No pien- tiene n.
so responde rle s i considero be lla o fea la retórica has ta GOR. - Así es.
qu e no le ha ya contestado previame nte qu é es. No se r ía Soc. - Veamos, pu es ; vay a aclararte, si puedo, lo que
conveniente, Polo; pe r o. s i q uie res informarle. pre gunta. pie nso con una e xpo s ició n seguida. Digo q ue, pu es to qu e
me qu é parte de la adulación es, a mi ju icio, la ret órica. son dos los obj et os, ha y do s artes, qu e correspon de n un a
POL. - Te lo pregunto; responde qué pa r te es . al c ue r po y o tra a l a lma; lla m o po lít ica a la qu e se refiere
d Soc . - ¿ Vas a ente nder mi co ntes tació n ? Es. se gún yo al a lma, pe ro no puedo defini r con un solo nom bre la que
c r eo, un s im u la c ro de una parte de la po lític a. se refiere al cuerpo, y a unque el cuidado del cuerpo es un o,
POL. - ¿ Pe ro q ué ? ¿D ice s q ue es be lla O fea? lo d ivido e n dos partes: la gimnasia y la m edi ci na ; en la
Soc. - Fea, pues llamo feo a lo m alo, pue s to que es pre· po lít ica, co r re sponden la legisla ción a la gimnasia, y Ia jus-
ci sc co ntes ta rt e co m o s i ya su pie r as lo qu e p ienso . tici a a la m edicina. Tienen puntos en co mún en t re st, pue s- e
GOR. - Po r Zeus , Sóc ra tes, ta m poco yo e ntie ndo lo q ue to q ue su o bjeto es el m ismo, la medicina con la gim nasia
dice s. y la jus ticia con la legis la ción; sin embargo, ha y entre ellas
e Soc. - Es na tu r a l. Go rgias. Aún no he ex p resado cla- algun a di feren ci a. S iendo estas cuatro artes las qu e pro-
r ame nt e m i pensam ien to, pero est e Polo es jove n e im - c u ran s iem pre el m ejo r esta do, de l cuerpo la s u na s y de l
pa ci ente . a lm a las otras, la a d ulació n, pe rcibién dol o as í, sin co no-
CORo- No te oc upes de é l; d ime qu é qu ieres deci r a l cim iento r a zon ad o, sino po r conjet u ra. se di vide a sí m is -
afirmar que la r e tórica es e l s im u lacro de una pa r te de ma en cuat ro partes e introduce cada una de es tas partes
la po lítica. en el arte correspondiente, fing iendo se r el a rt e e n e l q ue
Soc . - Vay a in te nta r e xpli car lo q ue m e pa r ec e la re- se introduce; no se ocupa del bi en, s ino qu e, ca ptándose d
tó r ica; s i no es co m o yo pienso, aq uí es tá Pol o que me re- a.la insensatez por medio de lo m ás ag radable en ca da oca-
464a ru tará. ¿Ex iste algo a lo qu e llam as c uerpo y a lgo a lo q ue s ió n , produce engaño, h asta e l punto de parecer di gn a de
llamas a lma ? gran va lo r . Así pu es, la c u linaria se in t roduce en la medio
CORo- ¿ Cómo no ? ci na y fing e co nocer lo s a lim e nt os m ás c onv en ie nt es pa-
SÓe. - ¿C rees qu e ha y pa ra cada u no de e llo s un esta- ra e l c ue r po, de manera q ue si, a nte niños u hom bres tan
do saludable? ins-en satos co m o niños, un cocin e ro y un m éd ico tuvie ran e
CORo- Sí. qu e pone r en juicio qu ién de lo s do s co noce mej o r lo s a li.
Soc. - ¿ y no es po sible un es ta do sa luda ble a pare nte menta s benefici osos y noci vos, e l m édi co mari n a de ha m-
sin que sea verdadero ? Po r ejemplo, hay muchos que pa- bre . A esto lo llamo adulación y afirm o q ue es feo, Pol o
r ece qu e tie ne n s us cuerpos e n bu e na cond ición y dt ñc tl- - p ues es a ti a q u ie n me dir ijo-,., porque pone su pu nto
~ 1. _ 4
DIÁLOGOS GO RG IAS 51
50
4650 de m ira en el pla cer sin el bien; digo que no es a rte, sin o las cosas junta s » es ta ría n mezcl ad a s en una so la , qu edan -
práct ica. porque no t iene ning ún fu nd a me nto por el que do sin d is ti nguir la s q ue pe r tenecen a la med icin a , a la h i-
ofrecer la s cosas que ell a ofrece n i sa be c uál es la natura- giene y a la c u lina ri a. Asl pu es, ya ha s oído lo que es para
leza de ellas, de mudo que no puede decir la cau sa de ca - mí la retórica: es respect o a l alm a lo equivalen te de lo que e
da una. Yo no Hamo arte a lo qu e es ir raciona l; s i tienes es la c u lina r ia respect o al c uerpo. Qu izá he obrado de mo-
a lgo qu e ob je ta r sobre lo que h e di cho, estoy d is pues to do inc ons ecuente prohib iéndot e los la r gos d isc ursos y ha-
a explicárte lo. bien do ala rgado el mio demas iado. Sin embargo, tengo
b Así pues, seg ún di go. la cu lina ria. com~ parte de la ad~- u n a disc ulpa, pues cuando hablaba brevemente no me
laci ón se oc ulta bajo la medicina; del mismo modo. bejo com prendí as ni e ra s ca paz de saca r provecho de m is res-
la gim'nástica se oc u lta la cosmét ica. que es pe rjud icia l, puestas, s ino que nec esit a bas ex plic ació n. Po r ta nto. s i
fa lsa, innoble, ser vil, que engañ a co n a p a r ie ncias, co lo res, tam poco yo puedo se rvir me de la s tuyas, alarga tu s dis- 466a
pu liment os y vestidos , ha st a el punto de .hacer que los que c ur sos; pero, e n caso contr a r io, déjame u ti lizarlas , pu es
se procu ran est a be l1eza p restada descuiden la belleza ~a­ es ju st o . Ahora, si pu ede s se rvirte e n algo de m i con tes ta-
rura l que produ ce la gim nást ica . Pa ra no ex tende rme ~laS , ción. sí rvete.
vaya ha bla r te como los gecmetras. pues tal vez asr me POL. -¿ Qué d ices ? ¿Te pa rece qu e la ret órica es
comprendas: la cosmé tica es a la gimnástica lo q ue la ~ u. ad ulación?
e li na ria es a la medicina: o, mejor. la cosmé tica es a la gtm- Soc. - He d ic ho u na pa rte de la adulación; pe ro ¿ no
nást ica lo qu e la so fist ica a la legis laci ón. y la culin aria tie nes me moria a tu edad. Pol o ? ¿Qué va a se r de spués ?
es a la medici na lo qu e la retó rica es a la just ici a . Como POL. - ¿ Acaso pien sas que los bueno s oradore s son
di go, so n distin ta s po r naturaleza, pero, como están m u y mal con siderados en las ci ud ades po r que se les c ree
pró ximas, se confun de n, e n el mi s mo c~mpo Y ~obre los ad uladores?
m ism os obje to s. sofi s tas y o radores, y ni ello s mismos sao Soc. - ¿ Me ha ces una p regu nta o em pie za s un b
be n c uál es s u propia fun ción n i los demás hom bres có- d isc u rso ?
mo se rvirse de e llos. En efec to. s i el al ma no gobe rnara POLo- Pregunto.
d al c uerpo, sino que és te se ri giera a si mi smo, y s.i ~lIa n? Soc. - Me parec e que no se les considera en absoluto.
in specciona ra Yd istingu iera la cocina de la me dic ina, 5 1' Pot.. - ¿Cómo qu e no se les con side ra? ¿No son los
no que el c ue r po por 51 mis mo juzga ra, co njet urando po r más poderoso s en las ciudades ?
s us propios p la ceres, se vería muy cum p lida la frase de Soc. - No, s i di ces que el pod e r es u n bien para qu ien
Ana xágora s 11 que t ú conoces bien , que ri do Polo, «to das lo posee 11.
POL. - En efecto , eso di go.
11 Ana ~ a.gora s de Cla aóme nes nadó en lo s pri me ros a ños ~e1 s. v y
mu rió en el 428 . Du ranle mu<:ho t iem po vivió e n Ate nilS en e l Circul o de
Per iclu. A consecuencia d e una ac usación d e imp ied ad ma rchó illám p-
"' 0 .. li ra Ilol1J ~ 11 "¿' Il Qutol di~kóJm eu (todas las cesas estab an rnezela-
SilCO. dond e mur ió. Fue uno de lo s más de stacildos ent~ los ~ lamado s
tlas . despu és vino . el espin ill o 'J las o rdenó) (Fr. B I DK).
• Iiló sofos d e la na tu rillu lu . La nO'leda d m b notab le e n Anaxag,:,ras es
1II Sob re eSla ide a d e s i cI pod er es u n b ien pa ra el que lo po see se
q ue el proceso de mezcla y «pa ra dón d e lo s elemen to s no ~s na pu ra:
me n te me cánico n i casua l. En el fo ndo d e tod o el proceso est a u n espln - ms tst e e n S2Se y es., don de Se indi ca la sit uac ió n d e los pode rosos res.
pecto a la j ustid a y se aclara qu e al gu nos poderosos pued en ser j us los.
tu que lo domi na todo : el ,,0115. La frase citada es: plÍnla ch rt mala i n ha·
52 DIÁLOGOS COR Gt A S 53

SÓc . _ E nt o nces c reo que los ora do re s l'I so n lo s ciu- Soc. - E n to nces refútame y d em u e stra q u e lo s orado-
dadanos menos poderosos . les son ho m b r es c uerdos y que la retó r ica es a rte y no a d u- 467a
POL. _ Pero gqué dices ? ¿ No pueden, como lo s t iranos, lac t ón . Pero s i no m e r efu ta s, lo s orado re s , q u e ha ce n en
e co nd e na r a m u e r te a l q ue quieran y des poja r d e s us bte- 1.. ci u d a d lo que le s pa re ce, e igualm ente lo s t ira no s. no
nes y des terrar de las ciudades a quien les pa rezca? po seen n in gún bi en co n e s to , pue s el po d er. co mo t ú d i-
S oc . _ Po r el perro, Polo , que dudo re specto a c ada C ~ ces . es u n bi e n, pe ro t ú m is mo r ec o noce s que ha ce r lo que
S8 que dice s si h a ce s u n a afi r mació n y expones u n pensa - II u no le parece , cuand o e s tá p ri va do d e r azón , es u n mal.
m iento o s i me estás in te r roga ndo . (. No es a sí ?
POL. - Te inte r r ogo . POLo - Sí.
56c . _ Está b ien, amigo . ¿Entonce s me h ac es a l m is- Soc. - En to nc e s, ¿cómo e s pos ib le que lo s o ra do re s
mo t iempo do s p reguntas ? ti lo s tira nos te nga n gra n poder en la s ci u dades, s i Pol o

POL. - ¿ Cómo dos? uo co n ve nce a Sócrates d e q ue h a ce n lo q ue qu ie r en ?


56c . _ ¿ No acaba s de de ci r a lgo así co mo q u e los ora- POL - Es te h o m b r e ... b
d dores condenan a muerte a los qu e qu ie ren. del m is mo mo- Soc. - Afirmo que no hacen lo q ue quie re n; re fút a m e .
d o q ue lo s tiranos , y despoja n de s us bi e ne s y d e stierra n POL - ¿N o acaba s de re co noce r que hacen lo que les
d e las ciudades al q ue le s parece? parece m ej o r ?
POL. - S í. Sóc . - y s igo r eco noc ié n dolo.
Soc. _ En to nces insisto e n qu e son dos pregu nta s y voy POL - E n tonces, ¿no ha ce n lo q ue qu ieren ?
a re spond e r a las d o s . So s tengo , Pol o , q ue lo s o ra d o re s SOC. - Digo q u e n o .
y los tira n o s tien en m uy poco p oder en las ci u dades. co- POL. - ¿Al h acer lo que le s par ece b ie n ?
mo h e di ch o h ace un mom en to ; en e fec to. por a s í deci rlo, soc. - Eso .
e no h ace n n ad a d e lo q ue q u ie re n , au nque h ac en lo q u e le s POL - Di ce s c os a s so r p ren de ntes y a bsu r das, Só-
p a rece m ejor . eru tes.
POI.. _ ¿ No es es to ten er u n g ran po der ? SÓe. - Oh excelent e Polo ", pa r a d iri g irme a ti seg ún
Soc. - No . al me no s seg ú n dic e Po lo . tu modo de h ab lar. no me a c uses; s i p u edes int errogar-
POL -¿ Digo yo que no ? Al co ntra r io, lo afi r mo. me. d emué str a me que e s toy eq uivocado ; en caso co n t r a - e
Soc . _ Por el.c., n o lo af irmas, pu e st o q u e d ice s q ue te- río. re sponde a mis p r egunta s .
ne r un g r a n poder e s un b ie n para q u ie n lo posee. POlo - Pr e fie ro co n te s ta r , para saber lo q ue quieres
POLo- Y lo m anteng o. d eci r .
Soc . _ ¿Cree s, en efecto, que es un b ien para u na pero Soc . - ¿ Piensas qu e lo s ho m b r e s q u ie r en lo que en c a-
sa n a privada d e r azó n hacer lo que le parece m ejor ? ¿L1a · da o ca sión hacen o q u ie r en aq ue llo por lo q u e 10 ha ce n ?
m a s a e s to te ne r u n gra n pode r? t'or ejem p lo , lo s que toman u n a m ed ic ina a d m in is tr ada
POL - No .
10 La pa la b ra o ra dor t iene ta mbién e n gri cgo la a(c p( iún de po li- JO sec re tes. im ita el mudo de lia b la r de Polo . No e s po s ib le co nse r-

neo (véa se Apo l. 32b ). t;:s te e s el ~e n t ido q ue lo ma Ir ec uen te me nte en e s- \'ó,r e n la t ra d ucció n la s írne tr ta cualll ilat iva y a cent u a l del griego n i la
le d iá logo. a lile ra cióIl.
54 DI ÁLOGOS GOR GIA S ss
po r el medico, ¿c rees que quie re n 10 qu e hacen: bebe rl a do esta mo s parados lo hacemo s, asim ismo, po r e l b ien.
y sufr ir la mo lestia, o aquello por lo q ue la be be n: reco- ¿ No es cier to?
brar la salud ? POL. - Sí.
PO L. - Es e vide nte que r ecob r a r la sa lud. Soc . - Luego, cuando mata mo s a a lgu ie n, si lo mata-
d Seico- Así pues, ta m bién los na vega ntes y los que t ra- mos, o lo des te r ramos o le p r ivamos de s us bie ne s, ¿ no
fican en ot ro s negocios no qu ie re n lo que hacen e n ca da In hacemo s c reyendo que es mejo r para nosotro s hacer es-
ocas ión, pu es ¿quié n quiere navegar, co r rer pe ligros y su- to que no hace rl o?
frir mo les t ias? Lo qu e quieren, según yo creo, es el fin por POL. - Desde luego.
e l que navegan : enriquecerse; e n efecto, na vegan buscan- Soc. - Luego los q ue ha cen todo es to lo hacen bu sc a n-
do la r ique za . do el bie n .
POL. - Así es. POLo- Así es.
56c . _ ¿No es así ta mb ién r espec to a tod o lo demás ? Sóc. - Pues bien, había mos con ven ido en que no es
¿ No es verdad que, cu a ndo se hace una cos a en razón de precisamente lo que hace mos en razón de algo lo que qu e-
a lgo, no se q uie re lo que se hace, s ino aq u ello po r lo que rvmos. s ino aque llo po r lo que lo hacemos.
se hace ? POLo- Exactame nt e. e
POL - S í. Soc. - Por ta nto. no de se amos s imple mente matar.
e Soc . - ¿ Exi ste a lgo que no sea bueno. m al o o inte rme- deste rrar de las ciudades n i quitar los bienes; de seamos
d io e nt re lo bue no y lo ma lo ? hace r tod as estas cosas c ua ndo son provec hosa s. y c ua n-
POL. - Po r fue rza h a de ser algo de eso. do son pe rj udiciale s, no las qu e remos. En efec to, qu e rc -
S óc. - ¿ Lla mas buenas a la sabiduría, la salud, la r i- 1110S. com o tú d ices, lo bueno, y no qu e remos lo que no
queza y a ot ras cos as se mejantes , y malas a sus con trari as? es ni bueno ni m al o, n i tampoco lo mal o. ¿ No es asJ?
POL. - Sí. ¿Crees que di go verdad. Po lo. o no ? ¿ Po r qué no res-
SOCo-¿Y dices q ue ni son b uen as n i ma la s la s qu e pe ndes ?
un as veces pa r tici pan de lo bueno, ot ras de lo malo. otras POLo- Es verdad.
46 8a ni de lo uno ni de 10 otro. como estar sentado, a nd a r. co- 50c. - Luego s i estamos de acuerdo e n esto. en el ca- d
rre r y na vega r y también las p iedras, la madera y ot ros so de que algu ien . sea ti ra no u orador. ma te. dest ierre de
c ue rpos semejantes? ¿N o es así? ¿O es a lgo di st in to a lo la ciudad o q uite los bie ne s a alg uno . e n la c ree ncia de que
que t ú llam as ni bueno n i malo? es to es lo mejor pa ra él, cu a ndo e n realidad es lo peor,
POL. - No. es a es to. és te ta l hace, sin du da, lo que le parece. ¿ No es a sl ?
Soc. - ¿Acaso se hacen es tas cosas in te rmedias. cua n- POL - S í.
do se hace n, b usc a ndo la s bue nas, o se hacen las buenas Soc. - i: Y hace ta m bíén lo q ue quie re c ua ndo lo que
busca ndo la s int ermed ias ? hace es. e n reali dad . un ma l para é l? ¿ Por q ué no
POL. - Sin duda. las int ermedia s pa ra a lca nza r la s con testa s?
bue na s. POL - Creo que no hace lo que qu ie re.
b SOC. - Luego, c uando a ndamo s lo hace mo s busca ndo Soc. -¿ Es posi ble que tal hom bre ten ga gra n pode r
el bien, c reyendo que ello es me jor , y, a l co ntrario , c ua n-
56 DIÁLOGOS GORGIA S 57
e en la ciudad, s i te ne r gra n po de r es un bien. según tú le, am igo. y además es digno de com pa s ión; el que lo ha ce
adm ites? ju s ta mente ta mpoco es env idiable .
POI..'- No es po si ble . POl o- S in duda , el qu e mu ere injusta men te es d igno
Soc . - Entonces tení a yo razón a l decir q ue es po s i- dc com pa sión y desgraciado .
ble qu e un homb re haga e n la ci udad lo que le parezca Soc . - Me nos que el que le ma ta, Polo, y men os que
bie n. s in qu e esto s ign ifique qu e t iene un gran po der y que el que m ue re hab iéndolo merecido.
hace lo que q uiere. POL -¿ Cómo es posi ble, Sócrates ?
POl o - Como s i tú , Sóc ra tes, no prefirieras tener fa- SOC. - Po rqu e el ma yor ma l es co me ter inju st ici a .
c u ltad de hacer en la ci udad lo q ue te parezca a no te ne r- POl. - ¿ Es te es el ma yor mal? ¿N o es ma yor reci birla ?
la . y no s in tie ras e nv id ia al ver que uno conde na a muerte S(Jc. - De n ingún modo .
a l que le parece bien , le des poja de sus bie ne s o lo en - POL - Entonces, ¿ tú prefe r ir ías recibi r la inju s t icia
carcela ''. a come te rl a ?
Soc. - ¿Te refiere s a c u ando obra ju st a o injust a- Soc. - No qu is ie ra ni lo uno ni lo ot ro; pe ro s i fuera e
me nte? nece sario co meterla o suf r irl a, preferirí a sufr irla a
4 b9a POL. - Como qu ie ra qu e obre, ¿no es, en a mbos casos, com e te r la.
un ho m bre envid iable? JI . POLo - ¿ Lue go tú no acepta rí as eje rce r la ti ra nía ?
SÓC. - Refre na t us palabras . Polo . Soc. - No , s i da s a esta palabra el m ismo sen tido qu e
POL - ¿ Por qu é ? yo.
SOCo- Porque no se de be e nvid ia r a los que no son e n- POl. - Entiendo po r ello, como decía hace un momen-
vid ia bles n i a los d esgraci ados, si no compa decerlos. lo, la fac ultad de hace r en la ci u dad lo qu e a u no le pa re-
POLo - ¿Oué dices ? ¿Crees que es és ta la si tuaci ón de ce b ie n: mata r, deste r ra r y ob rar e n tod o con a rreglo a l
los hom b res de qu e yo ha blo ? propio a r bit r io.
Soc . - ¿ Pues cómo no ? Soc. - Afortunado Pol o, d éja me ha bla r y des pu és o b-
POLo- Luego el que conde na a m uerte a quien le pa- j éta me. Si c ua ndo la pla za está lle na de gen te, llevando d
rece bie n y lo hace con jus ticia. ¿es e n tu opinión desgra- yo un puña l ocu lto bajo el brazo, te dijera; «Polo. acab o
ci ado y di gno de co m pasión? de adquiri r un pod e r y u na t ir anía ma ra vill osos; e n efec-
SOC. - No ; pero ta m poco e nvi d ia ble. lo, s i me pa rece que u no de los hombre s q ue estás vie ndo
POl . -¿ No acaba s de decir q ue es desgraci ado ? de be morir, a l momento morirá ; si me parece que a lguno
b Soc. - Me refie ro al que condena a m ue r te inj ust amen - de ellos de be tener la ca beza r ota , la te nd rá a l ins ta nt e;
si me parece que a lgu ie n te nga su manto desgarrado, qu e-
JI Esta s sal idas so n frecue nt es en Polo. Cua ndo u n r azo n am ient o le da rá desga r rado; tan grande es mi po de r e n es ta c iudad .•
deja co nvicto . recu rre a los proced imientos de persu as ió n pr op io s d e la Si, al no darme c rédito, te most rara el p uña l, qu izá me e
re tórica. ta le . co rno los sen tim ientos pe rso nales, el ju ic io d e la mayo rí a, dije ras a l ve rlo; • Sócra tes, as í todos se r ía n pode ro sos, ya
la e xag era ció n de las op in ion e s de l co n tra rio, e le . A pa rtir de aqu í ha sta
47 3e, Po lo o f rece bu en a mu est ra d e todos el los.
qu e, por el m ismo p roc edimi ento, po drías ince ndiar la ca-
II Pa ra es la op in ió n de Pol o, puede ve rs e un pa ralelo en lo q ue di- sa que t e pa reciera , los arsenales y la s tri rre mes de Alc-
ce Tra simaco en Rep. I 34 8b y as. na s y tod a s las naves, lo mi smo públi cas qu e pa rticpla-
58 DIÁLOGOS GORGIAS 59

r e s .» Luego, tener u n gran poder no es hacer lo que a uno POL. - Ciertamente, Sócrates, no hay nece sida d de re-
le parece. ¿P iensas tú que sí? fu tarte con ejemplos antiguos; los de ayer, los recientes d
POL. _ No lo es, a l m e nos e n estas condiciones. so n bastante para refutarte y demostrarte que m uchos
470a S oc. _ ¿Puedes decirme por qu é censuras esta clase hombres in justos son felices.
de poder? Soc. - ¿Qué ejemplos son ésos?
POLo - Sí. POL. - ¿No ves a Arquelao Jl, hijo de Perdicas, reinan-
SÚe. - ¿Por qué ? Dilo . do en Macedonia?
POL. - Porque necesariamente el q ue obra así es Soc . - S i no lo veo , al menos o igo hablar de é l.
ca st iga do . POL. - En tu opinión, ¿es fe liz o desgraciado?
Soc. - Ser castigado, ¿no es un mal? soc. - No lo sé; aún no he te ni do r el a ción con él.
POLo - Sin duda. POL. - Pero ¿qué d ices? ¿Si lo trataras, podrías saber- e
SÓe. _ Por consiguiente, admi rable Po lo, de n uevo ves lo, y desde aquí no tienes o tro m ed io de co nocer que es
que s i, a l hacer lo q ue a uno le parece, le s igue una utili- feliz?
dad, esto es el bien y, según parece, esto es te ner gran po- Soc. - No , por Zeus .
der; en caso contrario, es un mal y un poder mínimo. Exa- POL. - Seguramente, Sócrates, que ni siquiera del rey
b mi nemos lo siguiente : ¿No hem os acordado q ue algunas de Persta dirás que sabes que es feliz.
veces es mejor ha ce r lo que decíamos, co ndenar a muer- Soc. - y d iré la verda d, po rque no sé en q ué grado es tá
te , desterrar y privar de los bienes, y que otras veces no de instrucción y justicia.
lo es? POLo - Pero ¿qué dices? ¿En eso está toda la felici dad ?
POL. - Ciertamen te. Soc. - En mi opinión sí, Po lo, pues sostengo que e l que
Sóc. - Según parece, en este punto estamos los dos de es bueno y honrado, sea hombr e o m uje r, es fe liz, y q ue
acuerdo. el malvado e inju st o es desgraciado.
POL. - Sí. POL. - Entonces, según tú p iensas . ¿es desgraciado es- 4 7 1'1
S oc. - Ento nces, ¿cuándo es mejor hacer esto? Di cuál te Arquelao?
es el lími te que pones. Scc . - Si , a m igo , si es injus to.
POL. - Respond e tú m is mo a esa pregunta, Sócrates. POL. - Pues ¿cómo no ha de serlo? No tenía ningún de -
e Soc. _ S i prefieres q ue hable yo, Polo, digo q ue es me- recho al reino que ocupa, ya que es h ijo de una esclava
jor cuando se obra justame nte y peor c uando se obra de Alcetas, el he r m a no de Perdicas, y con arreglo a l dere-
in justamente. cho sería esclavo de Aketas, y si h'ubiera que r id o obrar
POL. - Po r cierto que es difícil re futarte, Sócrates; ¿no
te probaría inclu so un niño que no d ice s la verdad? JJ Arqcelec , hijo de Pcrd tcas ü , rey de Macedonia desde 413 a 399.
Soc . - Mucho le agradecería a ese n iñ o e, igu a lm en- su pe hacer de Su corte un cen tro de atracción de los más famosos poetas
te, te agradeceré a ti q ue m e refutes y m e libr e s de m i ton- y puso los cimientos del poderlo macedonio. Tucí DJDl!s{1I100. 2) d ice que
dio más i m pu l ~ o a la po tencia militar de su pueblo que los ocho reyes
t e rí a . No te canses de hac e r bien a un amigo; convénceme que le preced ieron . Pla tón no ju zga aq u i más que la ru indad mora l de
de m i error. su s acciones. Véase 525d. Su padre, Pe rdicas 11, reinó desde 450 a 413
e n con ta ctos alternat ivamen te a migab les y host iles co n Atenas.
60 Dl ALOGOS GORGJAS 61

en justicia estaría so m etido a é l y se ría feliz. según tu o pi- POL - Porque no q uieres, ya que, por lo demás, pien- e
nión. Pero la ve rdad es qu e se ha hecho in creíbl em ente sas co m o yo digo.
de sg raciado . pue sto que h a c o meti do las mayores inju sti- Scc. - Oh feli z Polo, in te ntas convencerme con proce-
b d as. En prime r luga r,lIamó a Alce ras. su dueño y tío, co n dim ient os r et ó r icos co mo los qu e c reen q ue r ef u tan ante
el pretexto de devolve rle e l reino de l qu e le ha bía des po- los trib unales. En efecto, a llí est iman q ue lo s unos refu-
ja do Pe rdi ces: lo hos pedó Jo e n s u cas a y lo e mbriagó a él ta n a los o t r os c ua ndo pr ese nt a n, e n a poy o de s us a fi r ma-
y a su h ijo Alejand ro. p rimo de Ar qucl ao y cas i de s u m is- ciones, numero sos te s tigos d ígnos de c r éd ito, mi ent r as el
ma edad; lo s met ió e n un carro y. sacá n dolos durante la que mantiene lo cont rari o no presenta m ás que un o solo
no c he, de golló a ambos y lo s hiz o desaparecer. H abiendo o n ínguno. Pero esta cla se de co m p ro bación no ti e ne va-
co met ido es te c r ime n, no advir tió qu e se habí a he cho como lor a lgu no para a ve riguar la verdad, pues , en ocasi ones, 472a
plet ame nt e desgraci ado , ni se a rrepintió de é l, s ino qu e, pue de a lgu ien se r co nde na do po r los testimonio s fal sos
poc o des pu és. renunc ió a la felicidad de ed ucar. co mo e ra de muchos y, a l parece r, prest igios os tes tigos. Sobr e lo qu e
e j us to, a su hermano, el hij o legítimo de Pe r d ices. niño de d ices vend r án a hora a apoya r t us palabras casi todos los
uno s s ie te a ño s, y de de vol ve rle e l reino q ue le co rrespon- a te niense s y e xt ra nje ros, s i dese as presentar contra m i tes-
día en just icia; po r e! co nt ra ri o, lo arrojó a un pozo. lo a ho- ligas de que no digo verdad. Te nd r ás d e tu parte, si es que
gó y d ijo a su mad r e, Cleopatr a J'. q ue , a l perseguir a un qu ier es , a Nicias TI , el hijo de Nlcerat o, y con él a s us her-
ga nso, habl a ca ldo en el po zo y había muerto. Po r cons i- manos, cuyos t r ipodes están coloca dos en fi la en el te m -
gu ien te, pues to que. entre los que habitan e n Ma cedo ni a, plo de Dion iso; as im ismo, si qui e r es, tendrás tambi én a
é l ha comet ido los m a yo r es c rímenes, es e l m ás des gra- Artstócrates JI, h ijo de Esce lio, e l dona nte de esa he rmo- b
ciado de todos los mace donio s y no el más fe liz; y quizá sa ofr enda qu e está en el te mplo '" de Apolo y, si quieres,
d algú n at en ien se, c om enza ndo po r t i, a ce pta r ía se r un ma- a todo e l linaje de Per ic les o a c ualquier o tra famili a de
ce do nio c ua lqu ie ra a nt es qu e Arqu el a o. Atenas qu e e lijas. Pero yo , aunque no soy más qu e uno,
Soc . - Ya a l principio de est a co nver sa c ión J', Polo, no a cepto t u opinió n; en efecto, no m e obligas a ello co n
te a labé porque, en m í opini ón , es tás bi en in st r u ido para razones, sinu q ue presentas co ntra m i m uc ho s te stigos fal -
la r etórica; pe ro dije q ue hab ías descu idado el m odo de
mantener u n d iá logo. Y a hora , ¿es acaso ést e e l ra zo na- )1 Nici as , fa mo so poltnco atenien se, na cid o haci a 470 y mu e rto en
mi ento co n e l q ue hasta u n n iño po dría r efutarme, y co n 4 13. Era u n demócra ta mo de ra do . partida rio de la paz co n Esparta. Fue
el que, seg ún c r ees, has r efu t ado m i a fi rm ación de qu e e l eleg ido est ratego e n num erosas ocasione , . La pa z de: 42 1 llev a ' u no m-
ore. Aunque no se le pu ed e a tribu ir la de rr ota de la ex pedición a S icilia.
injus to no es fe liz? ¿ De dónde, amigo? En verdad, no es- ,¡ 0::5 responsab le del desa stre fin al, por no ha berse retirado a tie mpo.
toy de a cuer do co n n ada de ' lo que dices. Lo s t rl pod es dedicados po r e l y por s us her ma no s Éucraln y Diog ne to
e n el templo de Dion i$O fue ron ganado s por ellos co mo cort'gos.
JO Como ~" a la Dodd s. la pa la b ra un l.u lS ind ica qu e la vic lima ba-
lO Aristocra les, a te niense de noble linaj e. En el lUl o 4 t 1, en el (IObicr-
bia s.uf ri do. a demllos., el q ue b rama rme nt c de un vincu lo re ligioso. nO de lo s CUill rociento~, fue con Terám en es un o d e los mo de ra do s. Fue
n Cleopa tra. cs posa del rey de Macedon ia Pe rd ica.. n . Tra s la m uer- uno d e lo s ge nera les con de nad os tr as la ba ta lla d e las Arginu$as e n 406.
te de ést e fue ta mbién es pose dc s u s ucesor Arquelao , q ue habla e limina- )O El texto d ice en Pylh /w< (hiu óiJ. Es e l le mplo d e Apolo en Alenas,
<.lo a l h ijo d e e lla y de Perdices n . Ore sl e5, hijo d e amoos , suced ió a Ar· cons tr uid o en t iem po s d e PisÍ5tra to, en el q ue co loca ban los trtpcdes los
q ue la o en el 399 .
vcnce do res del concurso de dit iram bo s en las Targe llas.
lO Véa se 44 Sd .
62 D IÁLOGO S G O RG IAS 63
sos e intent as despojarme de m i posesión y de la verdad . emba r go, s i no paga la pena y obtiene el cast igo de su cul-
Yo. por mi parte. si no te presento como testigo de lo que pa, y menos desgraciado s i paga la pe na y alcanza el caso
yo d igo a ti m ismo, que e res uno so lo, con side ro que no ugo por pa r te de los dioses y de lo s homb res <l .
he llevad o a ca bo nada digno de te ne rse e n cue nta sobre POLo- Te ha s p ro puesto deci t a bs u rdos, Sóc rate s. 473a
e el objeto de nues t ra co nversación. Creo que tampoc o tú Soc. - S in emba rgo , va y a t ra ta r d e consegu ir q ue d i.
ha brás consegu ido nada si yo, a unque soy uno solo. no es- gas lo mismo qu e yo , amigo , pues te conside ro a m igo . La
toy de acuerdo con tig o, y si no abando nas todos estos ot ros cu est ió n sobre la que a hora est a mos en desa cuerdo es és-
test imon ios. As! pu es , exis te es ta clase de pr ue ba en la que ta, e xa mínala ta m bién t ú. He dic ho e n a lgún mome nto de
creéis tú y otros m uchos, pe ro ha y ta m bié n ot ra que es nu estra conve r sect ón " que co mete r inj usticia es peor
la mía . Compa remos, po r t a nto, una y otra y examin emos que suf r irla.
si difie ren ena lgo. Pu es, preci same nte. las cues t iones que P O L. - Cie rtamente.
di scut imo s no so n mínim as. sino . ca s i con segurida d. aq ue- Soc . - y tú, por el cont rari o, que es pe or s uf r ir la.
llas acerca de las c ual e s saber la verdad e s lo má s be llo, POL - Sí.
e ignora rl a lo má s ve r gon zoso. En efec to, lo fundament al Soc. - Ta m bién dije qu e los que obra n inj u st a me nt e
de ella s consist e '" en conocer o ignorar qu ién es feliz y son desgraciados y tú me cont radij is te.
d quién nc lo es. Empezando por la cuestión que ahora tra- POL - Sí , por Zeu s.
t amos, tú c rees posible q ue e l hom bre que obra mal y es SOco- Al menos , según c rees, Polo. b
inju sto sea dichoso, s i realme nte e st imas q ue Arq ue lao POL. - Y mi o pin ión es ve rdad e ra .
es inj u sto po r una parte y po r la o t ra es feliz ~ I . ¿ De be· Soc. - Ta l vez. Tú d ijist e, po r el contrario, que los que
mas pe nsar q ue es esta tu o pi n ió n ? obran inju st am ent e son fel ices s i se lib ra n del castigo.
POL. - Ind uda blemente. POL. - Exac tamente.
SÓe. - Pu es yo afir mo qu e es im pos ible . He aquí un Soc. - Sin em ba rg o, yo afirmo que son muy de sgra-
pu nto sobre el que disc repamos. Em pecemos por él. ¿Aca- ciados, y que los que sufren el cast igo lo son menos. ¿Quie.
so el que ob ra inju st a mente será feliz, s i recibe la ju sticia res refu ta r tamb ién es to? .
y el cast igo? POLo- [Po r ci e r to que resulta e sa ref utaci ón aún más
POLo- De ningún mo do , ya que e n ese caso se ri a difíc il, Sócrates!
desgraci adl si mo. SOCo- No, de segu ro; más bien es imposible, pues la
e Soc. - Pe ro si esca pa a la ju sti cia e l que obra inju st a. ver dad ja má s es refut ada.
mente, ¿será feliz , según t us pa labras? POL. - ¿Qué dices ? Si un hom bre, obrando ínjustamen-
POL. - Eso afi rmo. le a l tratar de hace r se con la tir-anía , es apresado y. una e
SOC. - Pu es e n m i o pi n ión, Po lo, el que obra m al y es vez detenido, es tortu rado, se le m ut ila, se le queman los
injust o es totalme nte desgraciado; má s desgraciado, s in IIjos y, después de haber su fr ido él m is mo o tros m ucho s
... Véa se 4!l8b . <1 Pla tó n rns tsre co n frecuencia en q ue el ca stillO re d und a en bene-
'1 Esta ba mu y e ~ tend ida la c reen c ia de q ue se p uede se r fe liz au n h. io de l c u lpa b le. En 525b a f ir ma q ue es el Un il O medio de libra rs e de
en la máxim a inju st ici a. V"'ase Rep . 344a y ss .. d ond e 'I'ra sün a cc a seg ura In injusticia. Vé as e Rep. 380b.
qu e cu anto más inju st ic ia se corne ta , mayor fe lici da d se a lcanza. .J Vbse 4t>9b.c.
64 DIÁLOGOS GO RO IAS 65
u lt rajes de todas clases y de hab er vis to sufr irlos a su s me m andes a hora reco ger el vo to de los que e stá n a q uí;
hijos y a su muj e r , es fin alm en te c r ucific a do o un ta do d~ s i no tie ne s un me d io de refu ta ción m ejo r q ue és tos , cé-
pez y q uemado '" ¿este ho m bre s e rá a s i más f.e liz q ue S I J e me e l t urno, como te acabo de decir, y c o m p rueba la
se lib r a de es tos s u plici os, se e s tablec e co mo m-a no y go- cla se de ref u ta ci ón que yo c r eo nece saria . En ef ec to, yo
b ie rna d ura n te toda s u vida haciendo lo q ue quie r e. e nvi- no sé prese nta r en a poyo de lo q ue d igo más q ue u n so lo
di ado y co nside rad o feliz por los ci udadanos y los e xt ra e- te s tigo, aque l con q u ie n m an tengo la conve rsac ión, s in
d jeros ? ¿ Dice s q ue ref u ta r esto es impos ible ? preocu pa rme de los demás, y t a m poco sé pedir má s vo to
Soc . _ Trat a s de a sus tarme ", no ble Po lo, pe ro no me q ue e l s uyo; con la m ultitud n i s iq u ie ra ha blo " . En con- b
re fu ta s, igua l q ue c uando ha ce poco presentabas testigos . secue nc ia , m ira s i quieres por tu pa rt e ofrecerte a un a re-
Sin embargo. aclá rame un po rmenor. ¿ Has dicho: a l t ra- fut a c ió n respo nd ie ndo a mi s p re guntas. Creo firme men-
lar injus tamen te de hace rse con la ti ranía ? le q ue yo, tú y lo s demás hombre s c o nside ramos que co-
POl o- S I. me te r inj us t íc ia es peor que re cibírla y q ue e scapa r a l cas-
SOC. _ Cie r ta mente jamás serán feli ce s ni nguno de lo s t ígo es peor qu e su frirlo.
dos. n i e l q ue h a a lcanzado injustam en te la ti ranía .n i e l POLo- Y yo creo que ni yo ni ningún otro hombr e píe n-
que, a presad o. sufr e la pena, pues e nt re dos de sgraci ados sa a sí , po rque t ú m ismo, ¿preferi rí as r ecibir injusticia a
e ninguno puede ser má s fe liz; sin embarg o, e s r:nás de s gra~ co me te r la ?
ciado e l que e sc a pa al ca st igo y co nsigue se r urano . ¿ Oue Soc . - Tú también lo pref e riría s y todos 105 dem á s .
es eso, Pol o ? ¿Te ríes ? ¿Es é ste otro nuevo procedimien- POLo- Está muy lejos de s er asi; al cont rario, n i yo ni
to de r efu t aci ón ? ¿ Rein e c uando el inte rl ocu tor d ice a l- t ú ni ningú n o t r o pr efie re es o.
go, sin a rgu me ntar contra ello ? Soc. - ¿ No me va s a conte star ? e
POLo_ ¿ No c rees que queda s refutado, Sócrate s, cuan- POLo- Desde luego que s í, porqu e deseo sa ber q ué va s
do d ice s cosas tales q ue n ingún hombre se atrevería a de- ¡I deci r.

cir ? En ef ecto , pregunta a a lgu no de ~stos. Soc. - Para que lo se pas , re spónde me co mo s i e mpe-
Soc. _ No so y polt ü co . Po lo ; e l a ño pasado, habiéndo- za ndo de nu evo te pr egu ntara: ¿Qué e s peor, a t u j uicio,
me co r res pond id o por so r teo se r m ie m bro del Consejo ", co me te r inju s ricla o r eci b irl a ?
c ua ndo m i tribu ejercía la p re side nc ia y yo debía dirig ir POL. - Recibirla, según m i opin ió n.
47 4a la votación , d i que reir " y no s u pe hacerlo. As í pue s, no S oc. - ¿ y q ué es má s feo, comete r inju sticia o r ecibir-
la? Co n testa.
.. v éase un a d esc ri pc ió n se me ja nte en Rep. 362a. POLo- Co mete rla .
o Pla tón u sa la fo rma ve rb a l momlOlyflei; .., ormÓ era un es pan ta-
jo e n fo r ma de m uje r pa ra a~u~tar a Jos n ino s t ra~ie s os . .' <Iu res e n la ba talla nava l d e las Arginusas. qu e po r ctrcunstanctas la rgas
.. Para lo rm a r el Cons ejo de los Ouin ien to s ca d a un a de las díet trt- de re la ta r fueron somet idos a juicio. En esta ocasión, Sócra tes fue el únlcc
b us des ignaba cin cu ent a delegado. lla ma dos pritanes. Una espede de co- que, co n grave ~ie sgo de su vid a, se opuso a un juicio en blo que, a legan .
misión perman en te d e cin cu enta miem bros funcionaba todo el año, rele- dI! q ue la ley urd en aba que se les j u~g ara mdívid ualm e me (véas e JeNU P.,
vá ndose para e llo lBli trib us cada tre int a y ci nco o trein ta y seis días. Du· l/e/. I 7, 14; PLA TÓN, Apoi. 32). Aqul alud e con fin a irun la a su heroica in-
rante es te ti empo le corres pondí a a la tribu q ue form ab a dich a comisión tra ns igencia, d iciendo que p rod ujo risa.
la p resid encia del Consejo. 41 El desprecio de Plat ón por las o piniones de la multitu d p ued e ver -
. , Se refie re a su ac tit ud en el proceso con tra los gen er ale s vence· . c también en Rep. 492 y SS., Y en Protág. 317a . '
(,t, - ,
66 DlÁ LOGO S GO RGIAS 67

soc. - Po r consi gu ien te , es ta mbién peor. pue s to que SOCo- Asi pu es , c uando e nt re dos cosas be lla s una es
es m ás fe o. más be lla que la o tra, es porque la s u pe ra en un a de estas
POL. - De n ing ú n m odo. dos c ua lidades o en a m bas; esto es, e n pla cer, e n utilidad
d Soc . - Ya comp re nd o; crees, según parece, qu e no es o en uno y o tra.
lo m is mo lo bell o y lo bueno, lo ma lo y lo feo. PO L. - Cie rto .
P Ol o - No , por cie r to. Soc . - Ta m b ién c ua ndo ent r e do s co sa s feas una es
56c. - ¿ y q ue piense s de e sto? A toda s la s cosas be- más fea que la o t ra es porq ue la s upera e n dol or o e n da- b
llas. como los c ue r pos, los colo r es. las fi guras. los so ni- 1"10, ¿ no es p r eci so que sea así?
do s y la s costumbres. ¿ las llama s en cada ocasión bellas POL. - Si.
sin ninguna otra refe r enci a ? Po r ejemplo, en primer lu- SOC, - Pues prosigamos. ¿ Qué declamas hace poco so-
gar, a los cue r po s bellos. ¿ no los llamas bellos o por su bre cometer inju sticia y recibir injusticia? ¿No dec ías Que
utili da d. co n re la ción a lo que cada uno de e llos es útil. recibi rla es peor y que comete rla es m ás feo?
o por algú n de leit e. s i su vista produce gozo a quie nes los POL. - Sí lo de cí a.
cont emplan ? ¿ Pu ed es deci r alg o más a parte de es to sob re SOC. - LUe go, si co me te r inju s tici a es m á s feo que r e-
la belle za de l cuerpo ? cib ir la , ¿no es, ci erta m ente , m ás doloroso y seria m ás fe o
e POL. - No puedo. porqu e lo supera en dolo r o en daño, o en a m bas cosas
s oc. - y de l m ismo modo todo lo de más; las fi guras junt as? ¿N o es preciso que sea asl ta m bién esto?
y los colo res, ¿ no los llamas bellos po r a lgú n del eite, por POLo-¿ Cómo no ?
a lgu na u tili dad o por a m bas cosa s ? Sóc. - Exam inemos en prime r lugar esto; ¿ a ca so co- e
POLo- Sí. me ter injust ic ia produce m a yo r dolor q ue recibi rla, y los
SOC. - ¿ Y, asimismo , los so nidos y todo lo r ef erente que cometen inj u st ic ia ex perimentan mayor sufrimiento
a la mú sica ? que los qu e la reciben ?
POl.. - S í. POl. - Est o de ningún m odo , Sócr ates.
Soc . - Cie rtamen te t ambié n e n lo r ef erente a las le- SOC. - Luego no lo s upera e n do lo r .
yes y costu m br es; las que son bellas no ca recen, s in duo POLo- Ciertamente, no.
da, de esta cualidad , la de ser útiles o agradables o am o Soc. - y bi en, si no lo supera en dolo r, tampoco en arn-
bas cosa s juntas. ha s cosas jun tas.
POL. - No carecen, e n ve rdad , se gún creo. POL. - Parece q ue no .
47Sa Soc. - ¿ y es¡ es ta mbién la be lleza de los co nocí - Soc. - Queda , pu es, que lo s upe r e en la o tra.
m ient a s ? POL. - Si.
POL. - Exactamente. Po r cierto que a hora das una bue- Soc. - En el daño.
na defin ición al defini r lo be llo po r e l pla ce r y e l bien. POLo- Es pro ba bl e.
Soc. - ¿N o se define, entonces, lo feo po r lo co nt ra- Soc. - Entonces , s i lo s upe ra e n daño, cometer inju s-
r io , po r el dolor y el m a l? lici a es peor que recibirla.
POL. - Forzosamente. POl. - Es e viden te.
68 D IÁLOGOS
GORG IAS 69
d Soc . - ¿ No es cie r to q ue la ma yo r ía de los ho m br es POL. - Me pa rece q ue sí es bello, Sócra tes.
reconocen, y tam bi é n t ú 10 reco noc ía s ha ce poco , que e s Soc . - Cons ider a ta m bi én lo qu e vaya deci r. ¿No es
m ás fe o co me te r injus t ici a que r eci birl a ? dN lo q ue s i a lgu ien hace a lgu na cosa es necesar io q ue
POL - S í. ex ista a lgo q ue r eci ba la acción del qu e ob ra ?
Soc. - y a hora resu lta e vident e que es más daño so. POL. - Me pare ce q ue s í.
POLo - Asi parece. Soc. - ¿ y no es cie rto q ue este a lgo r eci be lo qu e ha -
Soc. - ¿ Pre fe r irías. en to nces, lo m ás da ño so y lo más 1 1' el q ue o b ra y de l m ismo modo qu e lo hace e l qu e o b ra ?
feo a lo me nos ? No vacile s e n res po nder, Pol o; no va s a lIigo lo s ig uie nte: s i a lgu ien da go lpes, ¿ no es p rec iso q ue
su fri r nin gún dañ o . En tréga te va lie nte me nte a la razón co- 1I 1gu los reci ba?
mo a un médico y responde; d i si o no a lo que te pregunto. POL. - Es prec iso.
e POL - Pue s no lo preferi r ía , Sócrates. Soc. - y s i da golpes viole nta o rá pidam en te , ¿ no es
Soc. -¿ Lo p referiría a lguna o t ra persona? preciso q ue los reciba ta mbién del m ism o modo lo q ue es e
POL. - Me parece q ue no , al meno s según e st e razona- solpeado ?
miento. POL - Sí.
Soc . - Luego e ra ve rdad m i afirmación de q ue n i yo , Soc. - Ento nces ¿ e l efe ct o e n lo golpeado es tal como
ni t ú, ni ni ngú n ot ro ho m b re preferir ía comet er inj u st i- lo produce lo q ue golpea ?
cia a recibirl a. porque es precis ame nte más dañoso. PoL - Desde luego.
POl.. - As! parece. Soc. - Tambié n, si a lguien q uem a, ¿no es preci so qu e
SOc o- Ves en to nces, Polo , q ue, co m pa r a do un modo ,lIlotU sea q ue mado ?
de re fut aci ón con el ot ro, no se pa rece n en nada ". Por Por, - ¿ Có mo n o ?
una parte, todos es tán de acue r do co nti go excepto yo; po r SOco- y si q ue ma viole nt a o dolorosamente, ¿ no es
o t r a, a m í me es su ficie nte tu so lo asent im ien to y tes ti- pre ciso q ue r ec iba la q ue m a dura lo q ue es q ue m ado de l
476a mo nio y recojo sola men te tu vo to s in p reoc u pa rme de los 111 is mo modo q ue la produce el q ue qu e ma ?
demás. Deje mo s esto asf. Exa m inemos a cont inuación e l " UL. - Cie r ta me nte .
se gu ndo pu n to so bre e l q ue te nía mos dist inta o p in ión M . SOC. - Así pu es, ta mbié n s i a lgu ien cor ta, ¿ no s ucede
¿Que el qu e co m e te injus ti ci a reci ba s u cast igo es acaso 111 m is mo, q ue a lgo es co r tado ?
el ma yor de los m a les , c o mo tú c reías , o es mayo r q ue no Pot. - Sí.
lo reci ba , co mo c re ta yo ? Exa m inémos lo de es te modo . SOco- y s i la co r tad u ra es grande, profun da o do lo-
¿ No es cier to q ue e n tu o p in ió n es lo m is mo , ~uan do se ros a, ¿ lo que es co r tado la r ec ib e se gú n la p rodu ce e l qu e d
co m e te un de lito, pa ga r la c u lpa y ser casti ga do con IlI rt a?
just ici a ? POl. - Evi dente me nte.
P OL , - Cierta m en te. SOc, - En r esumen, mira s i estás de ac ue r do, res pec-
b Soc. - ¿ Pue des afirmar qu e to do lo justo no es be llo l o 11 toda s las cosas, co n lo qu e yo ded a ha ce un m om eo -
en cuanto es ju st o ? Refl e xiona y co ntes ta. l o : ta l co mo produce la a c ción lo q ue obra la su fre lo q ue
4~ Es el res u lta do d e la re vis ión propuesta por Sóc ra tes en 472c. 101 recibe,
' o Véase 473 b. POL, - SI q ue lo acepto ,
70 DIÁLOGO S G ORGJAS 71

Sóc. - Puesto que ya es ta rnos de ac ue rdo e n esto, ¿s u- Soc. - ¿ Y en la di sposición de l c ue rpo? ¿No di ri as que
frir e l cas tigo es rec ibir a lgo o ha cerlo ? d ma l pa ra el hombre es la de bilidad , la enfer medad, la
POL, - Nece sariamen te, Sócrate s, es r eci bir algo . defor midad y ot ro s defect os se meja ntes?
S oc. - Sin d u da. po r pa r te de a lguien q ue obra. POL, - Cie r ta me nte .
POL. - ¿Cómo no ? Po r parte del qu e cas tiga. Soc. - ¿ No es n mas que ta m b ié n e n e l a lm a e xis te a l-
t Scc. - ¿ El qu e cas t iga con razón, cas tiga ju sta ment e? guna e nfermeda d ?
POL. - Sí. POL. - ¿Cómo no ?
S6c. - ¿Obra con ju sti cia o no? Soc. - ¿ No le da s el nombre de inju st icia. ignora ncia,
POL. - Con ju stici a . co ba rdí a y otros de est a índ ole?
Soc. - Lu ego el que es cast iga do. a l suf r ir el casti go. POL - Exac ta mente.
¿ recibe lo q ue es justo ? Soc. - Así pues. pa ra es ta s tres cosas: la r iqueza, el
POL. - Asl parece . cuerpo y el a lma. ¿ has d icho qu e h a y t res ma les: la po bre- e
Soc . - ¿ No hem os acordado q ue lo ju sto es bello? W , la enfermeda d y la inju s tici a ?

POL o - Cie rtamen te. POLo- 5 1.


Scc. - En tonces uno de estos eje cuta u na ac ci ón be- ..
Soc. - ¿ y cuál de es to s males es más feo? L. No es la
..
lla; e l o t ro la r ecibe. el que es castiga do. y, e n general, e l mal del al ma?
IIl JUS l l C l3

POL, - Si. POL. - Si. con mucho ,


477a Soc. - y si es be lla. ¿ no es b uena ? Pu es hem o s dicho Soc. - y si es el más fe o, ¿ no es también el más m alo ?
que e s a grada ble o es úti l. POL - ¿ En qué s ent ido ha blas, Sócra les?
POL - Fo rzo same nte. SÓC. - En éste : siempre lo más' feo es tal porque pro-
soc . - Lu ego ¿ recibe u n b ien el que paga su c ul pa ? du ce el m ayor dolo r o el mayor da ño o a m bos juntos se.
POL, - Eso pa rece , gú n hemos ac ordado a ntes 11. '
Soc. - ¿Ob t ie ne . pu es. un beneficio ? POL. - Exac tamen te,
POL - S í. Soc. - ¿ He mos conve nido a ho ra que lo más feo es la
soc. - ¿ No es aca so e l be ne ficio qu e yo su po ngo? ¿ No inj u st ici a y, e n gene ral, el def ecto de l a lm a ?
se mejora en su alma si. en realidad. es castig ado co n POL - Lo hem os conven id o.
ju sticia ? S óc. - ¿ No es ci e r to que es lo más do loroso y, por su- d
POL - Probab le me nte. pc ra r e n dolor, es lo más feo, o bien lo es po r s upe ra r en
Soc. - ¿ Lu ego se lib ra de la m al dad del a lma el que daño o po r a m bas cosas?
paga s u cul pa? POL - Po rzose meme.
POL, - Sí. Soc. - ¿E s, en ton ces. se r injus to, desenfrenado. coba r-
soc. -¿ No se libra. en tonce s, del mayo r mal ? Ex a mí- de e ignor an te m ás dolo ro so qu e ser po bre o estar
b nalo de es te modo : ¿e n la di sposición de la r iqueza e nc ue n- enfermo?
Iras al gú n o tro mal para el ho mb re que la pob re za ? POL. - Me pa rece qu e no, Sóc rates ; al menos no se de -
POLo- No, sólo la po b reza . duce de lo que hemos d icho.
11 Véase 47 5a.
72 DIALOG OS G OR G I" S 73

Sóc. - Luego la ma ldad del al ma es lo más feo , po r- Soc. -¿ No produce ta mbié n más p lacer que otra al -
que s upe ra a los demás males por el da ño desmesurado gu na o más u ti lidad o a m bas cosas, pu es to qu e es la má s
t y por el asom broso mal qu e caus a, puesto que no es po r be lla ?
el dolor , s egún tus palabras. POI.. -SI.
POL. - Eso resulta . scc. - ¿ Acaso ser cu rado por el médico es agradable
Soc. - Pe ro , sin d uda. lo que p rod uce el ma yo r d año y se deleit an los que están en c uración ?
es el ma yor mal q ue ex is te. POl. - Me parece que no.
POL - S i. SÓc . - Pe ro es ú t il. ¿ no es cie rt o ?
Soc. - Luego la injus t ic ia. e l desenfreno y los de más POl. - S I.
vicios de l al ma ¿so n e l mayor mal? SOC . - En efecto. se libr a n de u n gra n ma l; por cons t- e
POL. - E s evide nte . guien te, es ventajoso so po r ta r e! dolo r y recobrar la sa lu d.
Soc. - ¿ Qué a r te li bra de la pobreza? ¿ No es el a rt e POL - ¿Cómo no ?
de los negocios? So c. - ¿Acaso será más feliz en lo refe ren te a l cue r po
POL. - Sí. el que está en cu ración, o m ás bien el q ue no ha estado
Só c. - ¿ y de la enfe r medad ? ¿ No es la m ed ici na ? enfermo e n a bs olu to?
POL. - Sin dud a. P OL _ Es ev ide nte que el que no ha es tado enfe r mo.
478/ol Soc. - ¿ y de la maldad y d e la inj ustici a ? Si no ti ene s Scc. - Lu ego es fal so. s egún parece , que la fe licida d
la misma facilidad pa ra con te st a r, exa mín aJo de es te mo- sea c urarse de u n mal. s ino qu e es el no ha berlo adq u iri-
do: ¿a dón de y a nte quié nes lleva mos a los enfer mo s ? do e n ab solu to .
POL - An te los méd icos. Sóc ra tes. POl. - As i es.
Soc. - ¿A dónde a los injus tos }' a los desenfrenado s ? SOC. -¿ Pe ro qué ? ¿Quié n es más desgraciado e ntre d
POL. - ¿Quie re s deci r qu e ante lo s jueces ? J os que t ie ne n un mal, sea en e l c uerpo. sea en e! a lma.
Soc. - ¿ Para recibir su cas ti go ? el que se somete a c uración y se lib ra de l mal o el que no
POL. - Sí. se somete y sigu e ten iéndolo ?
Soc. -¿ No se si r ve n de ciert a norma de jus tic ia los POL - Me parece que el que no se so me te a curación .
que castiga n rectamente ? SOC. - y bien. ¿d eda mos que s ufrir el cas tigo e ra Ii·
POL. - Es evidente. h ra rse del ma yor daño. la maldad ?
SOC. - Así pues, el a rte de los negocios libra de la po- POL - S i lo e ra.
b b reaa : la medicina, de la enfermedad, y la justicia , de l de- SÓ<::. - En efec to. en ci erto mo do. el cas t igo mo dera
se nfre no y de la injus t ici a . a los hom bres. los hace má s j ust os y viene a se r como la
POL. - Así pa rece . me dicina de la ma lda d.
Soc. - ¿Cu ál es, pues. la más bella de éstas ? POL. - Si.
POL. - ¿ De cuál es ? Soc. - Ent onces el m ás feliz es el que no t ien e maldad
Soc. - Del arte de los negocios, de la medicina y de en el alma, pue sto qu e ha resu ltado evidente que és te e s
la ju st ici a. d mayo r ma l.
POL. - Es cie r to . e
POL. - Con m u cha dife rencia, Sóc ra te s, la jus ticia.
74 DIÁLO GOS GORGlAS 75

Sóc . - Le s igue. quizá , el que se lib ra de la maldad. POLo- SI qui e ro, si a t i te parece bie n .
POL. - As ' parece. 56c. - ¿ No re sulta qu e el mayor mal es la inju s t ici a
soc . - a s te es e l qu e es amo nes tado, ca sti gado y pa- y se r inj us to ?
ga su c u lpa. POl o- Al menos e so parece .
POL. - Si. Soc. - Y, cierta me nte, ¿no ha res ultad o ev ide n te que d
Soc. - Entonces vive en la mayor desgracia el que con- el medi o de libra rse de este ma l es paga r la c ulpa ?
se r va la inj us t ici a y no se libra de ella . POl.• - Es pro ba ble.
POLo - E so p arece. Soc. - ¿ y q ue el no paga rl a es u na pers istencia del
Soc. - ¿No es este prec isamente el q ue, cometiendo mal ?
los mayores delitos y vivi endo en la mayor inj us tici a. con- POL. -Sí.
479a s igue no ser amonest ado ni casti gado ni pagar su culpa. soc. - Así pues, el segu ndo de los ma le s en magnit ud
como tú dices que se encuentra Arquel ao y los demás u- es come te r injusticia; pero cometerla y no pagar la pena
ranos, o radores y hombres poderosos? e s, po r na tural eza , el mayor y el primero de todos los
POL. - Es probab le. ma le s.
Soc . - Poco más o meno s, excelente Polo. estos ha n P OL. - Así pa rece.
co nsegu ido lo mism o qu e el que, a tormentado por las más Soc . - ¿ No era sobre es to, amigo, so b re lo que est é-
grav es enfermedades, encon t ra ra el medio de no paga r a ba mos en desacuerdo? Tú considerabas feliz a Arquelao,
los médicos la c ulpa de los defectos de su cuerpo y de no aunque ha bla cometido los mayores delitos, porque no su-
ponerse e n curación, temiendo, como un niño, una cau te- fri a ningún castigo. Por el contrario, c re ta yo que s i Ar· e
b rización o una operación, porque so n do lorosas. ¿ No te quelao o cualquie r ot ro hom bre comete injusticia y no su-
parece as¡ ta mb ié n a ti ? fr e el ca stigo, le cor res ponde ser el más desgraci ado de
POL, -SI. los homb res, y qu e s iem pre el qu e come te injus ticia es má s
Soc. - Porque desconoce, según pa rece, cuán est ima- desg raciado que el qu e la suf re, y el qu e no reci be e l cas-
ble es la salud y la buena d isposi ción de l c uerpo. En efec- t igo de s u c u lpa más qu e elque lo reci be. ¿No es esto lo
to , es mu y proba ble, Polo, según lo que a hora he mo s acor- qu e dec ía yo?
dado , que hagan a lgo se meja n te los q ue trata n de evit ar POlo- SI.
el cas tigo; ven la pa r te do lo ro sa, pe ro están ciego s pa ra Soc. - ¿No se ha de most rado que de cía ve rda d?
la utilidad e ign ora n c uá nta m ayor desgrac ia es vivir con POLo- Así pa rece.
el a lma malsana , co r rom pida, injus ta e impla , que vivir 5 6c . _ Y bien , en to nces, si e sto es ver da d, Polo , ¿c uá l 480a
e con el c ue r po e nfe r mo. Por lo c ual ha cen t odo lo po sible es la gra n utilidad de la retóri ca ? Pues cier tamente, se -
para no paga r su s cu lpas y pa ra no líb rars e del mayor mal, gún lo que hemos conven ido, es necesario, so bre todo, vi-
procurá n dose ri quezas y am igos y-tra t a ndo de ha cerse lo gila rse p ara no co me ter injusticia , en la idea de que se rá
más pe rsu asivos en hab lar. Si lo que nosotros hemos con. un gran mal. ¿ No e s as l ?
ven ido es ve r dader o, Pol o, ¿ te das cuent a de lo qu e se de- POLo- Si n duda .
d uce de la conver sa ci ón o qu ieres qu e lo medit emos S6c . - Y s i come te injust icia uno mi sm o o algú n o t ro
juntos ? por el que se in terese, es preciso que vaya por propia vo-
76 D1ALOGO S GORG IAS 77

Ju ntad allí donde lo más rá pid am e nt e satisfag a su c u lpa, te de su ene m igo, pues ha y qu e e vitar es to--; pero, en e l
ante el juez, como iría ante el m édico, buscando con afá n caso de q ue nuest ro enem igo cometa injus ti ci a con otro, 48 Ia
b que la e n ferme dad de la inj u sticia. a l permanecer algún hay q ue co nseg uir po r todos los me di os , c on o bras y pa-
tiempo, no e m po nzoñe e l a lm a y la haga incura ble. ¿ Qué la bras , que no pa gue s u c ulpa n i vaya a nte el j ue z; y s i va,
podemos deci r, Po lo. si mantenemos nuestras a nt erio res proc ura r q ue sea a bs ue lto y no r eciba castigo nue stro e ne-
co ncl us iones? ¿ No es preci so que es to concue rde c on mig o; y s i h a r oba do gran ca n t idad de o ro, q ue no la r e st t-
aquello de es te modo, pe ro de otro modo no? tuya, s ino que la re te nga y la ga s te de man er a injus ta e
POL. - ¿ Y q ué vamos a decir, Sóc rates? impla en sí y en los suyos ; si ha cometido un de lito q ue
. .Sóc. - Por tanto, para defe nder nuestra pro pia inju s- merece la m ue r te, procurar q ue no mu e ra a se r pos ibl e
11~ la o la de nuest ros padres. amigos e hijos, o la de la pa- nunca, sino que viva inmortal en la pe rve r sidad, y de no
ma. cuando la co met a, no no s es de nin guna utilid ad la Sl'T así, q ue su vid a se p ro lo n gue en este estado el m ayor
e re tórica, Pol o, a no se r que se lo m e para lo cont ra rio, a liempo posible. Pa r a esto, Pol o, me parec e q ue es úti l la b
saber. que es nec esa rio a cusa r se en primer luga r a si mi s- re t órica. porqu e para el que no ti en e in te nción de co me-
mo, después a los pa r ien tes y a m igos, cada vez q ue algo- te r injustici a no es , cier tame nte , g rande su u tilida d , s i en
no de e llos cometa una fa lta, y no oculta r nada, sino ha- efecto tiene alguna, porque en nuestra conversación no
cer pat ente la falta pa ra qu e sufra el castig o y recobre la ha a pa reci do po r ninguna pa r te.
salud; obligarse a s i mi smo y obliga r a los demás a no aco- CAL. - Dime, Oue refonte, ¿Sóc rate s d ice est o en ser io
bardarse, si.no presenta rse con lo s oj os cerrados y va lie n- u b ro mea?
temen te a l Jue z, co m o a nte un m éd ico para q ue o pere y Q UER. - Me pa rece, Calic les , q ue habla co mple ta me nte
caute ric e buscando lo bue no y lo be llo, si n pe nsar e n el en serio; s in e m bargo, nada me jo r que pregun ta rle a él
do lor; y si ha co m e t ido un a falt a qu e mer ece go lp es, que mis mo .
d se pr es ente para qu e se los den; s i m er ece la pri sión , para CAL. - Po r los dioses , es toy dese ando hace rlo. Dim e,
q u e le a ten; si un a multa, pa ra paga rla: si e l destierro, pa - Sócra te s, ¿ debemos pensar q ue ha bl as en serio o que bro- e
r a desterrarse, y s i la m ue rte, pa ra mo r ir; que sea el p ri- ruc as ? Pu es si habl a s en se ri o y es r ealmen te ve r dadero
mer acusado r de sí m ismo y de s us fa m iliares y se s irva lo qu e d ice s, ¿ no es cierto que n ues tra vida, la de lo s hu-
de la re tórica para est e fin, pa ra qu e, a l qu edar pat entes ma no s , esta r ía tra strocada y que, se gú n parece, ha ce mos
los de litos , se lib ren del mayor m al. de la injus tici a . ¿ De- lodo lo co nt rar io de lo q ue debem os ?
he m os habl ar así o no, Polo ? Soc . - Oh Calíc les. si los hombres no ex pe r imentaran
t POL. - Cie rt a me nte , me parece absurdo, Sócrates; sin las mismas sensaciones , unos de un modo, otros de otro,
e mba rgo, q u izá te a utor-icen las ra zones pr ecedentes. vino q ue cada u no de no so t ro s experimentar a se nsacio-
Soc. - ¿ No es cierto que o ha y q ue an ula r aqué llas o lI C S prop ias s in re la ció n c o n las de los demás, no ser ía fá-
es forzoso q ue resu lte est a co ncl us ió n? ci l hacer co nocer a o t ro lo que uno m ismo e xperimenta .
.. POLo- Sí ; a l me nos esto es ast.
SÓC . - Pero co ns ide r a ndo e l lado opuesto : s i co nv¡e-
I)igo es to po rq ue he adver tido que ahora t ú y yo se nt imos, d
pre cis a m e nt e, e l m ismo afec to; som os do s y cada un o de
ne c au sa r daño a a lguien, e nemigo o qu ienquiera q ue se a 1I 050tros ama a do s obje tos: yo a Alctbtedes 11, hijo de Cfi-
- co n tal de qu e uno mi sm o no r eciba injustic ia po r par- 11 Alcibtades. fa mos o polírlco a te n iense (450·404 ). Es im po sib le es -
78 DI ÁLOGOS GORG U .S 79

ní as. y a la fi lo sofía; tú a los dos Demos, al de Ate nas ~l 110 sufrir el cast igo , c u an do se es c u lp a ble , no es el mayo r

y a l h ijo d e Pir ila mpe s. Me d o y c u en ta d e q u e en n in guna de todo s los males, o s i dejas esto sin refut a r, po r el pe -
ocasión , a unque e res hábil. puedes oponerte a lo que di - lTO , el di os de los egipc ios ,:, Ca licles mismo, oh Ca licl es,

cen t us a mores, n i a su s p u n tos de vis ta , s ino q ue te d eja s Illl es ta rá de acuerdo cont igo, s ino qu e di son a rá de ti du-

e llevar por ello s de un la do a ot ro. En la Asamblea , si ex- ra n te toda la vida. Sin emba rgo, yo c reo, exce le nte a mi -
p re sas tu parece r y e l pu eblo de Ate n a s dice q u e no es así, ~o, que es mejor qu e mi lira es té des afin ada y que dese»-
cam bias d e opi nión y dices lo qu e él qu iere; tam b ién res- tone de m i, e igua lm en te el coro q ue yo di r ija , y qu e
pect o a ese be llo joven. el hijo de Pir-ilampes, te s ucede mu c hos hombres no estén de ac ue r do con migo y me con- e
otro ta n to. En efecto. no eres capaz de ha ce r frente a las t rndiga n . a n tes de q ue yo , que no soy más q ue u no, esté
de te rminacio nes ni a las palabras de los qu e a mas, hast a en de sac ue r do conmigo mismo y me cont rad iga.
el pun to de que s i, al de cir t ú lo que continu a men te dices c.u .- Me parece, Sócrates, que en las conversaciones
a causa de ellos. algu ien se ext ra ña ra de que es ab s u rdo. le com po rtas fogosamente, como un verdadero orador po-

quizá le d irí as. s i quisieras decir la verdad. que si no ha - pu la r, y ahora u sa s es te lengu aje por que Polo ha sufrido
482a cen que tus amores dejen de decir esas palabras, jamás el m ism o inconvenien te que Oorgias su fr ió conti go y qu e
podrás ces a r rú de hablar a st . 1'010 le inc ulpó. En efecto, decía Polo ss que tú preguntas-
Pues bien, piensa que es necesa r io oír de mí palabras te a Gorgia s s i, en el ca so de que un di scípulo acudie ra d
se meja n tes, y no te extrañe que yo d iga lo que he dicho, .1 el desea ndo ap render retórica sin conocer qué es lo jus-
antes bien, im pide que la filosofia , qu e es mi amor, lo di- tu, él le e nseñarla es to . Gorgias dijo que s í se lo enseña-
ga . Pues d ice, qu erido am igo, lo q ue a hora me has oi do , rla, sintiendo ve r güe nza en deci r que no, a causa de la cos-
y es pa ra m i m uc ho me nos imp ulsiva que los otros a mo- lum bre de los hom bres, qu e se indigna ri an s i algu ien di -
res. Po rque este h ijo de Clinias cada vez dic e algo di st in - jera que no pu ede e nseñar qu é es lo ju s to . Que, e n virtud
to ; a l contrario, la filoso fía d ice s iempre lo mis mo . Dice de es ta concesió n, se vio obligado Go rg ias a con t rade cir-
b lo qu e a ho ra te ha ca us ado ex t rañeza , pue s tú mi smo ha s se y qu e es to es lo q ue a ti te agrada . En esta ocas ió n, Po-
asist ido a la conve rsació n. En consec ue nc ia o refútal a lo se rió de t i con ra zón, segú n c reo. Ahora, po r s u parte,
co mo dec ía a ntes, y de m ue s tra que cometer 'inj us tici a; el propio Po lo ha e xpe rime ntado lo mi sm o que Gorgia s,
y po r esta m isma razón no apruebo q ue Polo t e conced ie-
iK>lar a qui los rugos de es ta in te res a n te pcr$Ona lida d . Pasó "'u ju~ e n lu d
e n ca se de su tutor, Pe rlcies. f Ue discl p uJo y am igo de Sóc ra tes . Desde
ra que come te r injus ticia es más feo qu e s uf ri rl a . En efec-
4 20 hast a 406, años dec is ivos de la guerra del f elo po n eso , fue el mo to r lo, a consec ue ncia de es ta conces ió n, tam bié n a él le has e
de to da la pclttica de Alen as: coa lición co n Argos , expedición a Si cilia, em ba rullado e n la di scusión y le has cer rado la boca po r
revo luc ión de lo s Cua trocientos, etc. Hu ido de Ate na s aco nse jó m ilita r· 110 a t re ve rs e a decir lo qu e pe nsa ba . Pues en realidad tú ,
me nt e a Esparta, p rimero, y a f ers ia , d esp u és . Volvió a Aten as con IO- Sóc ra tes, di ciendo que buscas la verdad lle vasa e xtremos
do s lo s ho nore s en 407, pero fue des te rrado d e nue vo.
lJ Plat ón indi ca d e esta sencilla ma nera qu e e l n uevo interl ocut o r enojosos y propios de un orador de magóg ico la co nversa-
de Sóc ralcs es u n poln tcc. Dcmo , h ijo de f iril a mpes, d e qu ien ha b la Arts-
~ La prec isió n _el d ios d e los egip cio s > qu e hace Sócra tes al jura-
IMa nes (AV¡Sp IIS 97), e ra herma n as tro d e Platón , pu es Pirilamp es fu e el
segundo mari d o de Per lc uo ne . E l pe rso na je lleva como nombre pr o pio urcntc « por el pe r ro >, corrien te en él, está refe ri d a a l dios An ub is, re pre-
el de la pa la bra dAmos «p ueble» . El amo r homosexual ha cia Jos varo nes se nta do con ca beza de per ro ,
jó ve ne s era m uy fr ecu ent e . Sl Vé ase 46 1b.
80 DIÁI.OG OS GO RGrAS 81

cla n so b re lo q ue no es bello po r natu raleza y s í po r y a esto lla ma n co m ete r inju st ici a. Pe r o, se gún yo c r eo ,
ley ~. la na tura leza m isma demues t r a qu e es jus to qu e el fue r te d
En la ma yor pa rt e de los casos son cont r a r ias e n tre sí te ng a más qu e e l débil y e l poderoso m ás q ue e l q ue no
la natu ra leza y la le y; así pues, s i alg uien por vergüe nza lo es. Y lo dem uest r a q ue es as ¡ e n todas par tes, t a nto e n
483a no se a treve a deci r lo q ue piensa. se ve obliga do a co n- los a nima les como e n todas las ci uda des y r a zas hum a-
tra deci rse. S in d uda. tu te has pe rca tado de esta s u t ileza nas, e l he ch o de q ue de es t e m odo se juzga lo j us to: que
y o bras de ma la fe en la s d isc us iones. y s i a lg u ie n está ha- el fuerte do m ine a l débil y po se a más. En efecto, ¿c n q ué
b lando desd e el punto de vist a de la ley , t ú le in te r roga s cla se de ju stici a se fu ndó J e rjes pa ra ha cer la g ue rra a
desde e l punto de vista de la nat ur al e za. y s i ha b la de la Grec ia, o s u padre a los escitas, e igua lme nte, o tros infi-
na tu r a le za , le p re gu nt a s sob re la ley. Como aca bas de ha- ni tos caso s q ue se podri a n c itar? Si n e m ba rgo, a m i ju i- e
ce r e n lo de c o me te r inju s tic ia y sui rirla. Al hablar Polo cío, es to s obran co n arreglo a la n a tu r a le za de lo justo,
de lo que es má s feo co n a r reglo a la ley, tú tomaste el r a- y tam bién, por Ze u s, con a rreglo a la ley d e la n a t ur a leza .
zonam ien to co n arreglo a la na turaleza . Sin dud a, no co n arreglo a esta ley q ue nosotros est ab le-
En efecto. po r naturaleza es más feo todo la q ue es más ternos, por la que mod elamos a los mejores y m ás fue rt es
desventajoso , po r ejemplo. s ufr ir inju sti ci a; pe ro por ley de noso t ros, tomá ndolos des de peq ueños , como a leones,
b es m ás feo cometerla . Pues ni siq uiera est a desgracia. su- y po r mcdio de encantos y hec hizo s 1.015 es clavizamos, di-
frir la inju sticia , es propia de un ho m bre, sino de a lgú n cié ndo les que es preciso poseer lo m ismo q ue los demás 4846
esclavo para qu ien es pr ef erib le m orir a seg u ir vi vie nd o y que esto es lo be llo y lo justo.
y q ui en. a unq ue r eci ba un daño y sea ultr aja do, no es ca- Pero yo creo q ue s i llega ra a ha ber un homb re con tn-
pa z de defe nd e rse a sí m ism o n i a otro po r el qu e se inte- dale aprop iada ", sa cudirl a, q uebr aria y esq uivarla to do
r ese. Pe ro, segú n m i pa recer, 10 5 qu e estab lec e n la s leyes esto. y p isoteando nuestros escri t os. engaños, e ncanta-
so n 105 débiles y la m u lt it ud . En ef ect o. m ira nd o a sí m is- mien tos y todas las leyes con trari as a la nat ura leza, se su-
m o s y a s u propi a utilidad es ta ble ce n la s le yes , di s pone n hleva ría y se most rarla du e ño e ste n uestro escl a vo, y e n-
e las a laba nza s y dete rmina n las cens u ras. T ratando de a te- to nces res pla nd ecerí a la jus t icia de la nat u ra leza . Me b
mo ri za r a los hom br es m ás fu e r tes y a los capace s de po- pa rece qu e t a mbién Pín da ro ind ica 10 mi s mo q ue yo e n
seer m uc ho, para que no te nga n m ás qu e e llo s , dicen qu e el canto en el q ue d ice :
a dq u ir ir m uc ho es feo e injus to , y q ue eso e s comete r in-
jus t ici a : t rata r de po seer m ás q ue los otros. En efec to. se la ley, reina de todo s ~
siente n sat isfec hos , se gún creo, co n po see r Jo m ismo sien- de los m ortaLes y de Los i nmo rtales;
do inferiores.
Po r esta raz ón, co n arreg lo a la ley se dice que es in- y e lla. adem á s, a ña de:
ju s to y vergonzoso tratar de posee r más qu e la m ayo rí a
51 Apa rece aq u l cla ramen te un esbo ro d e la leorla del supe rhombre.
l. c añe tes e stabl ece la dis tinció n cn t ~e naturaleza (ph ysi s) y ley (n ó· l. Ellrag me nlO de una u bra perd ida d e Plnd arc deb e se r mlt~l"e ·
n1 ()!it co~~ ie n t e entre lo s sufi stas. v ean se Rep. 358 e; Protá g. 322d y 3 37c; lud" c on esc as o a poyo t e ~ lual. Tampoco Caliele s ~ecu e rda el tex to cu n
Critun SO y Leyes 626a . " xlIc litu d . se gú n el e scolia s ta de P I~ IMRO. Nem. 9. 35.

,, 1. - 6
82 DI ÁLOGOS GORG IAS 83

...conduce. jus niicá ndola, la m ayo r violencia, ded ica ndo la mayor parte del d ía a eso
con su mallO omnipoten te: me fundo en lo que él se su pera a sí mismo;
en los trabajo s de Hem cles ", puesto que sin paga rlas...•
pero do nde se encuentra inhá bil de a llí huye y desprecia 485 a
así di ce poc o más o me nos , pue s no se el canto, pero d ice a q ue llo , mi e nt ra s qu e a la ba lo o tro po r amor de s i m is-
q ue, s in comprarlas y s in qu e se las d ie ra Ge rió n, se lle vó mo, c r eye ndo q ue así hace su propio e logio.
e s us va cas '", en la ide a de q ue esto es lo jus to por natu- En ca mb io, yo creo q ue lo más razonable es tomar pa r-
raleza : qu e la s vacas y todos los dem á s bie nes de los in fe- le e n a m bas cosas; está muy bien ocuparse de la fil o so fia
r iores y los débil es sean de l super ior y de l m ás pode ro so . e n la m edid a e n q ue s irve pa ra la educación. y no es des-
Así pues, ésta es la verda d y lo reconocerás s i te d iri - do ro filosofa r mi ent ra s se es jo ven ; pero, s i c ua ndo uno
ges a cosa s d e mayo r im po r tanci a. deja ndo ya la filo so- es ya ho m bre de e dad a ún filosofa, el hec ho res ulta ridl-
fía . Cie r tamente, Sóc rates. la filoso fía tie ne s u encanto si c ulo, Sóc rate s. y yo experim ento la m ism a ím presión ano
se to m a modera damente en la juventud; pero s i se ins iste l e los que filosofan que ante los.q ue pron unci ~n m al y j~- b
en ell a más de 10 co nve nie nte es la perdición de los guete a n. En efecto. c ua ndo veo Jugar y balbucear a un ru-
hombres 01. Por bi en dotada que esté un a persona, si st- ño q ue por su eda d debe aún habl a r así, me c a usa a leg ri a
gue filosofa ndo de spué s de la juvent u d, necesariamente y me parece gracioso, propio de un ser libre y adecuado
d se ha ce inexpe r ta de todo lo que es preciso que conozca a su edad . Al co nt ra r io, cuando oigo a un niño pronunciar
el q ue tiene e l propósito de s e r un hombre esclarecido y co n claridad me parece algo desagradable, me i r r il a el
bien considera do . En ef ecto, llegan a desconocer las le- otdo y lo ju zgo propio de u n esclavo. En cambio, c ua ndo
yes q ue rigen la ciudad, las pal abras qu e se deben usar se oye a un hombre pronuncia r malo se le ve ju gue tea n- e
pa r a tratar co n los ho m bres e n la s rel a c iones pri vada s y (lo, re sulta ridículo, degradado y digno de azote s. Esta m is-
pública s y los place re s y pas io nes huma nos; en una pal a- m a im presió n experimento también r especto a los q ue fl-
bra, ignoran to t al m en t e la s cos t umbres. A sí pu es, cuan- lusofan . Ciert ame n te , viendo la filosofi a en un jo ven me
e do se encuentran e n un negocio privado o púb lico, r es u l-
complazco, me parece a decuado y cons ide ro qu e este hom-
ta n r id fc u los, de l m ism o modo q ue so n r idíc u los . a mi j ui- hrc es un se r libre; por el contrario, el q ue no fil osofa
cio, los pol tucos c ua ndo , a s u vez, va n a vuestras conver. me parece servil e inc a pa z de estim a rse ja má s d igno de
sae to nes y di sc us iones. En efec to , s uce de lo qu e dice a lgo bello y generoso. Pero, en cambio. c uando ~eo a un d
Eu rfp ides u: brillante es cada u no en aquello y hacia ho m bre de edad que a ún fil o so fa y q ue no renun c ia a e llo ,
aquello se apresura, creo. Sóc rates, qu e este hum b re debe se r az o ta do. Pu es,
( 'O IllO acabo de d ecir, le s uc ede a és te , por bien do ta do qu e
~" He racfe s, hijo d e Ze us y d e Ak me na. f u e s iempre perseguido por
He ra. Tu vo que so po rt a r numero sos t rabajos de lo s que ha n q ue<lado doce est é, qu e pi erde su co ndició n de ho m b re al huir de los lu -
mmo fa mosos. fu e e l má s pop u lar y el más vene ra do de to dos los hé roe s. guro s frecuentados de la c iu dad y de las asambleas do n-
00 Una d e las em p re sas de lIer acles, el ro bo e n el leja no occidente
de las vaca s de Ger ión, gigan te de t res cu er pos a q uien dio m ue rt e ,
01 Plat ón ci ta est a op in ión del vul go en o tra s d e su s o bras. el. fe: · JI "¡(Illen to s. En unu de su s e scenas los do s he rm ano s gemelos exam ina n
dÚ>1 64a; Rep. 487c . d,.s mod o s d e vida: la a cti va, p re ferida por Zeto, y la de:Anfión , dedi ca da
61 Pa s aje de la A>1 /fopa de Eurípid es, ob ra qu e co noce mo s só lo po r " lu poesla y a la m úsica.
84 DIÁLOGOS GO RG I.... S 85

de . co mo d ijo el poeta u. los ho mbres se hacen ilust res. y preciado e n la c iudad? A u n h o m b re ast, a u n q ue sea u n
al vivir el r e sto d e s u vida ocu lto e n u n r inc ó n, s usu r ran- poco d u ro dec irlo, es po sible a bofe tearlo impu ne m e nt e .
le do co n Ire s o c uatro jo venzu e los , sin d ecir ja m ás n ada no- Pero , a m igo, h a zme caso: ces a de argum e~llar, cu ltiva el
ble. gra n d e y co n venien te . buen co t1cie rto de los negccrcs y c u ltívalo en lo q ue t e d é
Yo. Sóc rat es , si e nt o bastante amistad por ti; ast pues, reputaci ón de ho m b r e sensato; de ja a o tros esas ingenio-
estoy m uy cerca d e experimen tar lo que Zeto r espec to a sidades. que, más b ien, es prec iso llamar in su lsece s o ch a r-
Anfi ón, el personaje de Eurípides del que he hablad o. Ta m- latanerlas, por las que habitaras en una casa va cía; imi ta.
bién a mí se m e ocurre decir te lo m is mo q u e a quél a su no a lo s q ue d iscu te n esas pequ e ñece s . s ino a los que tie- d
hennano: «Te d escuid a s. Sócrates" d e lo que debes o c u- nc n r iqueza , es ti m ación y ot ros m uchos bi e ne s.
pa rl e y disfrazas u n a lma ta n nob le con una a pariencia Soc. - S i mi a lma fue ra d e oro. Calícles . ¿ no crees que
486tl infant il. y no podrí a s e xp resa r la fr a se a dec uada e n la s me sen tiría co nt e nt o a l e ncon tr a r a lg un a de esas p ie d ras
d el ibe r acio ne s de j u stici a . no d irías co n fi r m eza a lgo co n- ron las que p r ueba n e l o ro , la mejor po s ibl e, a la que a p ro-
ve n ie n t e y persuasi vo n i tomarlas una d eci si ó n a u d az en ximando m i a lma, s i la pi edra con fi r m ara que es tá bi en
favor de ot ro.» En verdad, qu erido Sócrate s - y n o t e ir ri- cultiva da, yo sabría con certeza que m e h allo en b u en es-
les con m igo, p ues voy a h abla r en in te r é s tuyo- , ¿no te lud o y que no n ece sito otra compr obaci ó n ?
parece ve rgon zoso estar com o c r eo que t e encuen tr a s tú C.... L . - ¿ y por qué m e pregunta s e so , Sócrate s? e
y lo s que sin cesar llevan adel ante la filoso fí a ? Oj. S oc. - Va y a decírte lo. Cr eo q ue a ho r a , a l e n co n t rar-
Pu es si aho r a algu ien te to m a a t i. o a c u a lquie r o t ro l e a ti, he e nc on t r a do ta l h a ll a zgo .
como t ú, y te llev a a la p ri si ón d ici end o que has c o meti do CAL. - ¿ Po r qué ?
u n d eli to , s in h a berlo comet ido. sabes q u e n o p od rí a s va- Soc . - Est oy segu ro de que, en lo q u e tú est és de acuer-
h lerte tú m is mo . s in o q u e tc quedarias atu r d id o y boqui a- do con m igo sobre lo q ue m i al ma pi en sa . eso es ya la ver-
bi e rt o s in sa ber q ué d ecir, y ya ante e l tri b unal, au nque dad mi s ma. Pu es observo q ue e l q ue va a h acer una co m- 487a
t u acusado r fuera u n hombre inc a paz y si n e stima ció n. probac ión s u fi ci e nte so b re s i u n a lma vive rec ta mente o
se ri as conden ad o a morir s i quisi era propone r co nt ra ti 110 , h a d e ten er tre s co sa s que tú ti e nes: ciencia, benevo-
la pe na d e m uerte . y b ie n, ¿qué sabiduría es esta, S ócra- lcncia y d ecisi ó n pa r a h ablar. En efecto. yo en cu ent ro a
tes, si u ,., arte toma a u n homb re bien do tado y le hace muc hos q ue no son cap ac es de proba rm e porque no so n
i,.,je rior " sin qu e sea capa z d e d efenderse a sí mism o ni vabios como tú; o tros son ci er tamen te sab ios, pe ro n o q u ie-
de s a lva r se de lo s m á s gra ve s pe li gros n i de salva r a nin- I r-n d eci r me la verdad porque n o ti enen inter és por m í,
gún o t ro, a ntes b ien , queda ndo e xp uesto a se r d e spojad o I UlIlO tú lo tiene s. Es to s d os fora ste ros, Gorg ia s y Polo,
e por sus e nem igos de todo s su s bi en es y a viv ir , en fi n , d es- ..u n sa b io s y amigos míos; pe ro le s falta d ecisión para h a- b
blur y so n má s ve r go nzosos de lo q u e co nv ie ne. ¿ Y cómo
.,\/ éa se HOMERO, J/lad a IX 44 1. llo ? Ha n ll egado a ta l g rado de ti mid e z. q ue , po r ve rg üen-
bOCal ieJe s adapta a es te mo me n lo las p alabra s de leto a Anlión. 1 11 , ha o sado cad a u no de ellos con tradecirse a sí mismo
.1 Sob re la situación de l fi lósofo Fren te a la vida ac tiva , véall se Teet.
1' 11 presenci a d e muchas p e r sonas y so b re a suntos de m á-
IB c y se. y Re p. 517e.
.. Ca lieJes , en es ta p rim e ra in tervención , loma con t in ua men te pa. xituu impo r t a nci a . E n ca m b io, tú t ie nes to do lo que los
sajes de la Anuopa d e Eurlp id es.
,r

86 DIÁLOGOS GO RG IAS 87

demás no tienen; estás suficien temente instruido ", como rea lme nt e, la co nsum a ció n de la verdad. Es e l más bello
podrían co nfir m a r muchos aten ienses, y estás bien d is- de lodos, Calicles, e l examen de estas c ues tio nes so b r e la s
puesto hada mí. que tú me ha s c e nsurado: cómo de be s e r un ho mbre y qué
¿ En qué me fundo pa ra afi r mar e sto? Vo y a decír te lo. de be pra c t ica r y ha sta q ué g rado e n la veje z y e n la j uve n- 488a
e Yo sé, Ce líclcs, q ue vosotr os c ua tro os ha bé is hecho so- tud . Pu es s i e n a lgo yo no o bro recta men te en m i m o do
cías en el cu ltivo de la sabtdurte: tú , Tisanclro de Afid na, de vivir, te n la cer tez a de que no ye r r o in tencio nada me n-
And r ón 01, hijo de Androci ón, y Nau stctdes de Colarges. te , sino po r m i ig no r anci a. Así pues , ya q ue has empe za do
En cie r t a o ca si ón, os 01 delibe r a r so br e hasta qué punto a a mo ne sta r me , no m e a ban do ne s y mués trame s ufic ien-
se d ebe c u lt iva r la sab id u rí a , y sé q u e prevaleció entre vo- tcmen tc qué e s e so en lo q ue d cbo oc u par m e y de qué mo-
so tr os, poco m á s o menos, la o pin ió n de no esforzarse en do pue do llega r a e llo. Y si enc ue ntra s q u e yo a hora e st oy
fil oso fa r ha sta la pe r fección ; m á s bi e n. por e l cont rario, d c a cuer do con ügo y q ue , des pué s, no ha go aque llo mí s-
d os ex ho r ta steis recíp rocame nte a te ner cu ida do de no des- mo e n lo que estuve de a c ue rdo, considera que soy en te-
t ruiro s s in advertirl o. a l llegar a 'se r más s ab ios de lo r am en te es túpido y no m e des ya m á s co n sejos, en la se- b
co nveniente. Por ta nto, cuando le o igo aconsejarme lo m is- gu r tda d de q ue no so y dig no de nada. Repíteme de sde el
mo que a tus mejores amigos, tengo un a p rueba suficien· principio: ¿cómo decís que e s lo justo con arreglo a la na-
le de q ue , e n verdad, eres a m igo m io . Y en cuan to a que tur a leza Pínd a ro y tú ? ¿ No es q ue el más poderoso a r re .
e re s ca paz de hablar li bre me nte y sin a vergonzarte, tú mi s- hale los bien e s del menos pode roso, que domine e l m ej o r
mo lo a fir m a s y la s pa labr a s q ue a cabas de pron u nciar ul in ferio r y q ue posea má s e l m á s apto q ue el ine pto ?
co inci de n contigo. ¿ Ac a so d ices que lo j us to es o t ra cosa, o he re co rd ad o
Evidentement e, so bre estas cuestio ne s la sit ua ción es tá bie n?
e a ho r a a s í. Si en la co nve r sa c ión t ú es tá s de a cue rdo co n- CAL. - Eso dec ía antes y a hora lo r ep ito .
mi go en al gún pu nto, es te punto habrá q uedado ya su fí- 5 6c. - Pero ¿ lla m a s tú a la m isma person a ind is tin ta -
ci en tem e nte p r oba d o por m í y po r ti , y ya no se rá pr eci so me nte m ej or y m á s poderosa? Pues t am po co a nte s pud e e
somete r lo a a ira pr ueba . En efec to , jamá s lo acepta rías, ent e nder q ué d ecí a s r eal m ente. ¿Acaso lla m a s m á s pode-
ni por falt a de sa bid urí a , ni porq ue sie nta s ex cesiva ve r - I'O SOS a lo s m á s fu ert es . y es pre ci so q ue lo s dé b ile s o be -
g üe nza, n i ta m poco lo acepta rla s inte nta nd o e ngaña r me, dezcan a l má s fue r te , segú n me parec e q ue m anife s ta ba s
pues e res a mi go m io, com o tú mi smo d ice s . Po r consi- 111deci r q ue la s grandes ci udades a tacan a la s pequeñ a s
guiente, la co nform idad de mi o pi nión co n la tuya se rá ya, 1"I111 arreglo a la ley de la na tur a le za , por que son más po-
dc rosa s y m ás fuerte s, convencido de que so n la mi sma
u I~ón ic", ",lus ión a las numerosa s d t as (Ptndaro. Hc me rc, Eurtpl- \ usa más poderoso, má s fuer te y m ejor, o bien es pos ib le
des) que Ca lides ha imroduc ido e n s u intervención.
.. And rón, h ijo d e And roció n, e s mejor conocido que los o tros dos se r m ejor y, a l m is mo tie m po, m e nos pode roso y m á s d é-
amigos de Ca licles. Pla tón lo p",se nl a, en Pro tdg. 315c . e n tre los jóvenes hil, o, por a ir a parte, se r m á s podero so , pe ro se r peo r, o
q ue ro dea n a Hipias. Fo rmó pa rte de lo s Cua trocien tos. Pa rece q ue a la hic n es la m isma defini ción la d e mejor y m a s poderoso ? d
c a lda d e la ohgarquta denunció a Anliron te. A Na usic tde s Iv no mb ran Hxplícarne co n cla r id ad es to . ¿ Es u na mi s ma c osa, o so n
A JII S TÓ FANE S , en Asamble/s/ as 4 2 (',. y JE NOf O NTE , en Mem. Il 7 , (',. Posd a
u n r ico nego c io d e mo liend a d e gr a nos. Par ece q ue ta m bién Tisa nd ro e ra
losas distin t a s más pode roso, m ejo r y m ás fu erte ?
hombre de s iluaci6n eco nóm ica flor eci en te.
88 DIÁLOGO S G ORG IAS 89
CAL, - Pues bie n. te d igo claramente que so n la mis- ti la ley, y s i habla con arreg lo a la ley lo refi e ro a la
ma cosa. na tu ral eza .
Soc. - ¿No es ci e rto qu e la mult it ud es, po r natura le- CAL. - Es te hombre no de jará de deci r ton te rtas. Di-
za, má s po de rosa qu e un solo hombre? Sin du da ella le me. Sócrates, ¿ no te a ver güenzas a tu eda d de andar a la
im pon e la s le yes. como tú de c ía s a hora. ca za de palabras y de conside rar como un ha lla zgo el que e
CAL. - ¿Có mo no ? alguien se equivoq ue en un vocablo ? En ef ect o. ¿crees qu e
SOC. _ Entonces las leyes de la m ult it ud son las de los yo di go que ser má s poderoso es d is ti nto de se r mejor ?
más poderosos. ¿ No te es toy dici e ndo ha ce t iempo que para mi es lo mi s-
CAL. - S in duda . mo mejor y más poderoso? ¿O c rees que d igo q ue, s i se
e Soc. - ¿ No son ta m bié n las de los mejo re s ? Pu es los reúne una c hus ma de esc la vos y de ge ntes de tod as cl a -
más pode ro sos son, en cierto modo. los mejores. segú n t ú ses. s in ni ngún va ler, excepto quizá se r más fue rt es de
d ices. cuer po, y d icen algo. est o es ley?
CAL. -SI, soc. - Bien. sapientís imo Ca licles: ¿e s eso lo que
Soc. - ¿ No son las leyes d e éstos bel las po r na tur al e- di ces ?
za . pues to que son ellos más pode ros os? CAL. - Exactamente.
CAL. - S1. SOC. - Pues bien. afor tunado a migo, también yo ven - d
SOC. - As1 pues, ¿ no c ree la m ultitud. como tú decias go sos pec h a ndo hace ti e m po que es a eso a lo que tú lla.
a hora. que lo jus to es conserva r la igu al dad y qu e es más ma s más poderoso. y te pregunto porque de seo afa nosa-
489a ,'e rgonzoso comete r injusticia que recibirla ? ¿ Es así o no? mente saber con cl aridad lo que quieres dec ir. Pue s. s in
y p rocura no se r a tra pado aq ui tú tam bién po r vergüen- duda. tú no cons ide ras qu e do s juntos son mejores qu e un o
za . ¿C ree o no c ree la multitud que lo ju sto es con serva r solo, ni a tus escla vos mejores qu e tú mi sm o porqu e se an
la igualdad y no poseer u no más que los demá s, y qu e es más fu ertes que tú. Sin embargo. di . come nza nd o de nue -
más ve rgon zoso come te r inj usticia qu e recibirla ? No te vo. ¿q ué e nt ien des por los mejores. puesto qu e no son los
niegues a con testa r me a esto. Calíc les. a fin de que. s i es- más fuertes ? Y. ad mira ble Cahcles. e ns éñ ame con más
tá s de acue rdo conm igo. mi opinión qu ed e res pal dada ya du lzura para que no me ma rc he de t u escuela.
po r ti . pues to qu e la com parte un hom bre capaz de CAL. - Te burles. Sócrates. e
d isce rnir. soc. - Po r Zeta " , Ca licle s, del c ua l te has se r vido
CA L. - Pues bien . la m u lt it ud p ien sa a sí. uhora para d ir igi rme t a nta s ironía s. Pe ro , va mos. ¿qu ié-
Soc . - Luego no só lo por le y es má s ve rgo nzoso come- ne s di ces que son los mejores?
b te r inju st ici a qu e reci bi rl a y se e sti ma jus to con se r var la CAL. - Los más aptos .
igual dad, si no t a m bién por naturaleza. Por con s iguie nte. Soc. - ¿ No ves que t ú mismo dices palab ra s. pe ro no
es muy posi ble qu e no dijer as la verdad en t u s anter iores e xplicas nada? ¿No vas a decir si llamas mejore s y má s
palabras, n i qu e me acusaras con razón. al deci r q ue son poderosos a lo s de mej or ju ici o o a otros ?
co sas co ntrari as la ley y la n aturaleza y que , a l co nocer CAL. - SI, por zeus. a éstos me refiero exac tamente.
yo es ta op osi ción, ob ro de mala fe en la s conversaciones
y s i alguien hab la con arreglo a la naturaleza lo refiero .. v eense 484e, 485e y la Jl . 62.
90 DIÁlOG OS GO RGI AS 91

490a SOC. - En ef ect o, mu ch as vece s una pe rsona de buen Soc. - Ya com prendo. ¿Quizá ves tidos, y es preci so
j ui cio e s m ás poderosa. según ru s palabra s, que in n ume- q ue el t ejedo r má s hábil tenga e l m anto más grande y que
ra ble s inse nsa tos y es preci so que éste do mine y que 10 $ pasee con los vest ido s má s nu me r oso s y be llos ?
otros sea n dom ina dos. y que q uien domina posea más que CAL. - ¿ De qué ves tidos ha bla s ?
lo s do minados. Me pa rec e q ue q uie r es dec ir esto -y no Soc. - Pu es b ien, res pecto a l ca lzado, es e vide nte que
a ndo a la caz a de palab ras-e , s i d ices que un o so lo es má s de be tene r m ás el de más juici o pa ra es to y el mejo r. Qui- e
pode roso q ue un g r a n nú me r o de hombr es . I.á es p reci so qu e el za pa te r o a nde lleva ndo puesto má s
CAL. - Pu es es to es lo que d igo . Sin duda, creo que eso calzado y de ma yor tamaño que nadie.
es lo justo por na tu r a le za, q ue e l m ejor y de m ás ju icio CAL. - ¿Qué calzado es ese? In sistes en decir tonte r ías.
go bie rne a los m eno s capace s y po se a más q u e e llos . S6c. - Pu es si no te refie res a es to, quizá se a a esto
b Soc. - De t ént e a hí; ¿q ué irás a decir a hora ? Su po nga- orro: por ejem plo, el ag r icu lto r de buen juicio para el cul-
mos que es ta mos e n u n mis mo luga r. como a hora, m ucha s t ivo de la t ierra y, ade má s, bue no y hon rado ¿no debe q u ]-
pe rsona s re unidas, que ten emos e n común muchos a limen- l á tene r más parte de la s semill as y us ar para s us te r re-
tos y bebid as y qu e somos de todas las condiciones: u nos 1I0S la ma yo r ca n tidad posib le de ellas ?
fu ertes , ot ros déb iles, y que uno de nosot ros es de me- CAL. - ¡Siempre d ic iendo lo mismo. Sócrates!
jor juicio acerca de esto po r se r médico. pero que , como SOC. - No sólo lo mismo, Calicle s, s ino ta mb ién sobre
es na tu ral. es má s fue r te que u nos y más débil q ue otros; las mis mas cosas.
¿ no es ci e r to q ue es te, po r se r de mejo r j uici o qu e nos- CAL - Por los dioses, no cesas, en suma, de ha bla r con- 49 10
o tr os, se rá mejo r y m ás pode roso res pecto a esto? un ua mente d e zapa teros, ca rd ado res, coc ine ros y m édi -
CA L. - S in d uda . u n;, como s i nuest ra conve rsació n fuera acerca de es to.
e Scc. - ¿ Ha brá de tene r, e nton ces, más pa rt e de estos 56c. - Asl pues, ¿ no vas a decir ace rca de qué cos as
ali mentos qu e nosot ros , porque es mejor, o bien, por te- d más poderoso y de mejor ju icio t iene con ju st icia ma-
ner el mando, es preciso que re pa r ta todo, pero qu e en el yo r pa rt e qu e los de má s? ¿ O, sin decirlo t ú mismo, no pero
con sumo y empleo de ello pa ra su propio c uerpo no tome mlt tr ás que yo lo s ug ie ra ?
e n e xce so, si no quiere sufri r da ño , sino que to me más que CAL. - Es toy dicié ndolo de sd e hace tie mpo. En p r ime r
u no s y men os q ue ot ro s, y s i es p rec isa mente el más débil luga r, ha blo de los más pode roso s, que no son los za pa te-
de tod os. no te ndrá el mejor menos que tod os ? ¿ No es as í. lO S n i los cocine ro s, s ino los de bue n j uicio pa ra el gc bier- b
a m igo? no de la ci u dad y el modo como es ta d a bien admi ni stra-
CAL. - H a bla s de alimentos. de be bida s, de médicos, da , y no sol ament e de b ue n ju icio, sino ad emás decidi dos.
d de to nt ert as . Yo no d igo eso. pu es to que son capaces de lle va r a cabo lo que pien san ,
Sóc. - ¿ Acaso no llamas mejo r a l de más ju icio ? Di s í y que no se desa n iman por de b ilidad de espír itu.
o no. Soc. - ¿Te da s c ue nta, e xcel e n te Ca lícl es . de q ue no
CA L -Si. (' S lo m ismo lo q ue tú me re prochas a mi y lo que yo te

Soc. - ¿ Y no es preci so que el mejor te nga má s ? re pro cho a t i ? En e fecto, tú a se gu ras q ue yo d igo s iem pre
CAL - Pe ro no a limen tos n i be bida s. las mism as cosa s y me cens uras po r ello; yo por el con-
Iru rio , t e cen su ro porque jamás di ces lo m ismo sobre las
92 DIÁLOGOS G O RG I ....S 93

mismas cosas, si no que primero has afirmado qu e los me- honr osa , co mo yo d ije a ntes, y esclaviza n a los hom bre s
e JOTes y lo s más poderosos so n lo s más fue rtes; d e spué s, más capaces po r na tu ra leza y, como e llos mism os no pue -
q ue los de mej or juicio, y a ho ra. de nue vo, vie nes con otra den procurarse la plena satis fa cci ón de su s deseos, ala-
d ef in ición: llam as m ás poderosos y mejores a los má s de- ba n la mode raci ón y la just icia a ca us a de su p ropia d e bi- b
cididos. Pe ro , amigo. acaba ya de decir a quiénes llamas lidad. Porque para c uant os desde el na cimiento son h ijo s
rea lmente mejores y más poderosos y respecto a qu é. de reyes o para los que, po r su propi a natu ra leza, son ca-
CAL. - Ya he dicho que a los de bue n ju icio para el go- pac es de adquirir un pode r, ti ra nía o p rincipado. ¿qué ha-
bie rno de la ci ud ad y a los decid idos. A éstos les co r res- bría, en verdad, más verg onz oso y perjud icia l que la mo -
d ponde regir las ciud ad es. y lo jus to es que e llos te nga n má s de ración y la jus ticia, si pudie ndo d is fr u ta r de sus biene s,
qu e los ot ros, los gobernantes más qu e los gober na do s. sin qu e nadie se lo im pida , lla ma ra n pa ra q ue fue ran s us
Soc . - Pero ¿y respe c to a sí mismo s. a migo ? ¿ Se do- due ños a la ley, los d isc ursos y la s ce ns u ra s de la m u it t-
min a n o son dom inado s ? tud ? ¿Cómo no se ha brían hec ho des graci ados po r la be- e
CAL, - ¿Qu é quie res deci r ? [la ap a r iencia de la ju st ici a y de la mode r aci ón, al no da r
Soc. - Hablo de qu e cada u no se domine a sí mis mo; más a sus amigos que a sus en emi go s, a pesa r de gober-
¿o no es p reci so domin a rse a si m is mo, sino só lo dom in a r llar e n s u pro pia ci udad ? Pero, Sóc ra t es, est a verdad qu e
a los dem ás? tú dices busca r es así : la molicie, la intemperancia y el
C.. . L. - ¿Qué e nt iendes por dom ina rse a sí mi sm o ? liberti na je, cuando se les ali menta, constituyen [a vir tu d
SOC. - Bi en se ncillo, lo q ue en tien de la ma yor ía: ser }' la fe lici dad: tod as esa s otras fa nta sia s y conve nciones
e moderado y d ue ño de s i mi sm o y dom inar las pas ion es y de los hombres co nt rar ias a la na tu ra le za s on necedades
deseos qu e le su rj a n. y cosa s sin va lo r.
CAL. - ¡Qué a mable eres, Sócrates! Llamas moderados Soc. - Te en tregas a la d isc us ión , Ca licles, con una no- d
a los id iotas. hle franqueza. En efec to, mani fies ta me nte a ho ra estás di -
Soc. - ¿Cómo ? Tod o e l m u ndo puede darse c ue nt a de cie ndo lo q ue los de más p ie nsan, pero no quie ren deci r.
que no d igo eso. Por tan to, te s u plico que de ningún modo des fa llezca s a
CAL. - Preci sa mente eso es laqu e d ices, Sócrates. Pu es I¡n de que en realidad quede comple tamente claro cómo
¿cómo podría ser feliz un homb re si es es clavo de algo ? hay que vivir. Y dime. ¿afir mas que no se han de re pr i-
Al cont ra ri o. lo be llo y lo ju sto por naturaleza es lo que mir los deseos, si se q uiere ser como se debe ser, s ino qu e,
yo te voy a decir con s inceridad. a sa ber: el que quiera vi- pe rm it iendo qu e se haga n lo más grande s que sea po si-
vir rec ta me nt e debe dej a r q ue s us deseos se hagan t a n " le, hay que proc u rarles sa t isfacción de dond e quiera que .
gra ndes como sea posi ble. y no repri mirlos. si no , qu e, sie n- vea , y q ue e n esto cons is te la virtud ? e
4920 do los mayo re s que sea po s ible, de be se r capaz de sa tisfa- CAL. - Eso a fi r mo. ci e r tame nt e.
ce rlos con deci sión e in teli ge ncia y saciarl os con lo que Soc. - Luego no es razona b le deci r q ue son felices los
e n cad a oc asión sea obje to d e deseo . Pero c r eo yo q ue es- tille no nec esitan nada .
to no es posible pa ra la mult itud; de ah í qu e, por vergüen- CAL. - De es te modo la s piedras y los m uertos se r ía n
za, ce ns uren a tales hombres, oc ult an do de est e modo su tclic fs imos .
propia impotencia; afi r man que la int empera nci a es des-
94 DIÁLO GOS GO RGtA S 95

Soc . - Sin e m ba rgo, es te rrib le la vida de los qu e tú los insensatos a un cedazo porque es tá ag ujereada, ya qu e
d ice s. No me ex t rañarla q u e E urípide s d ij e ra la ve r d ad no es ca paz de r et en e r nada po r inc re d u lidad y po r o lvl-
en estos versos l 0: do. Estas com pa raci ones son, p ro bab lemen te . absu rdas ;
¿quién sabe si vivir es m orir sin em ba r go, da n a entende r lo qu e yo des eo demos tra r-
y morir es vivir? te, si de a lgún modo soy ca paz de e llo, pa ra pers uadirte
a q ue cambies de o pinió n y a qu e prefie r as, e n ve z de u na
493a y qu e qu izá e n rea lidad nosotros es temos m ue r tos. En vida de in sa c iedad y desen freno, una vida ordenada q ue
efec to. he oído dec ir a un sabio qu e nosotros a hora est a- tenga s ufi ciente y se dé po r satisfec ha s iempre con lo qu e
mas m ue rtos , q ue nues tr o cuerpo es un sepu lcr o TI y qu e tiene. Pe ro ¿ te pe rsua do en a lgo y cam bia s de opin ión e n
la par te del a lma e n la q ue se encue nt ran la s pa sio nes es el se nt ido de q ue los moderado s son m ás fe lices que los d
de ta l nat uraleza que se de ja seducir y cambia súbitamente desen fre na dos o no vas a camb ia r en nada, por m ás q ue
de un lado a o t ro. A esa parte del a lma. habl a ndo en ale- le refi e ra otra s m uc has alegorías se mejantes ?
garfa y haciendo un juego de palab ras. cie rto hombre CAL, - Má s verdad es lo ú lt imo, Sócrates .
in ge nioso 11, quizá de Sicilia o de Italia . la llamó tonel. a Soc. - Vea mos; voy a e xpo nerte otra im a gen proceden.
causa de s u docilidad y obediencia, y a los insensatos los te de la mi sma esc uela que la a nt erior. Examina. pu es , si
b llamó no inicia dos; decía que aquella parte del alma de lo q u e dices acerca de cada uno de lo s géneros de vida.
los insen sa tos en que se hallan las pasiones , fijando la t-] del moderado y e! de l d isol uto, no sería ta l como si hu -
atención en lo irreprimido y descubierto de ella, e ra co- hiera do s ho mb res q ue t uviese cada u no de e llos muchos
mo un tone! agujereado a ludiendo a su carác te r to neles. y los del p ri m e ro estuviesen sa no s y caba les, e l
insaciable n. Este, Ca licles, a l cont rario q ue tú , expresa UIIO lle no de vino, e l o t ro de mi el. el o t ro de leche y o tros e
la opin ión de que en e! H ades e-se refiere a lo invis ib le- muc hos de o tros varios liq uidas, y q ue estos liq uida s a no
te nd rí a n e l colmo de la desgr a c ia los no in ici ados y lleva- d uvies e n escasos y sólo se pud iese n co nseguir con muchas
r ía n agua a l to ne l agujereado co n un ce dazo ig ual me nte y a r d uas dili genc ia s ; es te hombr e, despué s de llenar lo s
agujereado. Dice , en e fecto, segú n m anifes ta ba e l qu e me ton eles. ni ec ha ría ya más líquido e n e llos, ni volverla a
e lo refirió, q ue e l cedazo es e l a lma; y com pa ró e! al ma de preoc upa r se , si no q ue que da rí a t ranqu ilo con respec to a
ellos. Pa r a el ai ro s ujeto, sería po sib le a dq uir ir los ltq ui-
1'U En la lra gedi a Friso o e n Polid o. Aris lófllnes rid ic uliza do s ve·
dos co mo para el prime ro , aunque tam bién con díttcul-
ces es ta fr ese en Ranll s 1082 y 1477 ss. La idea o ri g inal se alribu~ a
Heráchtc. tnd: pe ro, tenie ndo s us r ec ip ient es agu jereados y po dr-i-
11 La co mpa ració n e ntre sómll (cuerpo) y sen,a (lum ba) se hace mils dos , se verla o bligado a estarlos llen a ndo co n sta nt emen - 494~
sensible e n griego. do nd e sólo va ria el timbre d e la voc al pri me ra de la te, de d ía y de noche , o soportaría lo s m ás g raves su fr í-
pal abra. nuc ntos. Puesto que el gén ero de vida de un o y ot ro es as í,
11 El «hom bre inge nioso. a l que alude Sóc ra les' era, p rob eble me n-
l : ICUSO di ces q ue e l del dis oluto es m ás feliz qu e el del m o-
te, o n pit agó rico (1 un órfico de la esc ue la que florecía en e l su r de It alia .
7l Hay e n e l texto griego un jueg o de palabras de sonid o p ró ximo dcrudo ? ¿Co nsigo con es tos ejemplo s pers uadirte a qu e
y s ign ificación di s tint a: pi,ha nó lI {dócil) y pitñon {tonel). ano1/uus (insen- adm itas qu e la vida o r de nada es mejor que la di so luta, o
satos) y amyiw us (no inici ado s) _ po r s u et imo lo gia (no cerra do s)- . Há· 110 lo co ns ig o?
di s (Had es) y " "idi! (inv isib le). No es }>osible co nservar en la t raducción
estas se llleja nzu.
96 DIÁLOG OS G ORGtAS 97

CAL, - No me persuades , Sócrates. Pa r a el de lo s t o- soc. - ¿Si puede vivi r plácidame nte, puede vivir tam-
neles lle nos, ya no hay place r algu no, pue s es o e s precisa- bién felizmente?
m en te lo que ant es lla m a ba vivir como una piedra; c uan- CAL. - S in duda.
b do los ha llenado , n i goza ni sufre. Al contra r io, el vivi r Soc. - ¿S i se rasca só lo la cabeza, o te sigo preg un tan- e
ag radab lemente consiste e n derramar to do lo posible . J o más? Piensa, Calicles, qué co ntes tarás s i te pre gunt an
SÓe. - ¿ No es preciso, s i derrama mu cho, que sea tam- a continuación to da s la s cuestiones consiguient es a ésta.
bién m ucho lo que sale y que sean grandes los orificios y como res umen de ellas, ¿no es la vida de los disolutos
para los desagües? terr-ib le, vergonzosa y desgrac ia da? ¿ O bien osarás decir
CAL. - S in duda. que son fe lices s i tiene n abundante mente lo que desean?
Soc . - Tú ha bl a s de la vida de un alcaraván 1' , pero CAL. - ¿No te avergüenzas de llevar a tales extremos
no de la vida de un m uerto ni de una pie dra. Y di me, ¿q uie- la c onve r saci ó n, Sócrates?
res decir , por ejemplo, que es prec iso te ne r hambre y, Soc. - ¿La llevo yo a este punto, a migo mí o, o e l q ue
cuando se tiene hambre, co mer? dice así, simplemente, que los que gozan, de cualquier mo-
CAL. - Sí, cie r ta men te . tia que gocen , son felices, y no disting ue q ué placeres so n 495a
e S óc. - ¿ y ten e r sed y be be r cuando se la t iene? bue nos y qué otros son malos? ". Pero d í aún otra vez,
CA L:- Sí, Y tener todos los demás deseos y, a l t en er- I:afi r m a s que so n la misma cosa placer y bien, o hay a l-
lo s y ser capaz de sat is facerlos , go zar y vivi r felizmen te. gú n p lacer que no e s buen o ?
S éc. - Muy bien, amigo ; c on tin úa como empezas te y CAL. - Para q ue no me resulte una contradicc ión si d i-
procura no ceder por vergüenza. Es preciso, según pare - 1-\0 q ue so n d istintos, afirmo q ue son la misma cosa.
ce , que tampoco yo me c on te nga por vergüenza. Di me , en Soc . - Destruyes, Ca licles, las bases de la conversa-
primer luga r , si te ner s a rna , rascarse, con la posib ilidad rión, y ya no puedes bus ca r b ien la verdad c onm igo s i vas
de rascarse cuanto se q u ie ra, y pasar la vida rascándose u habla r co ntra lo q ue piensas.
e s vivir feli zmente. CAL, - Pue s también tú ha ce s lo m is mo, S ócrates . b
d CAL. - ¡Qué absurdo e res, Sócrates, verdaderame nte Soc. - Ciertamente, ni yo obro bien, si hago es o, ni t ú
un orador demagógico ! Iumpoco. Pero, considera, Ca lícles, que q uizá e l bien no
Soc. - Pues así, Ca licles, he desco nc ertado a Po lo y a ron síst a e n gozar de c ua lq uier modo, pues, si esto es así,
Gorgias y le s he hecho a vergonzarse; pero es seguro que res ulta evidente q ue se p rod ucen to da s las consecuencias
t ú no te de sco ncie r t a s ni te ave rgüenzas, po rq u e e r es de- ve rgonzosa s q ue a ho ra he in sinuado y o tras m uchas m á s.
cidido. Pero, simplemente , res ponde. CAL. - Según tú crees, Sócrates.
CAL. - Digo, pues, que incluso e l que se r a sc a puede S cc . - ¿Pero de verdad, Calicles, sos tie nes eso?
vivir plá cidamente. CAL. - Desde lue go.
S oc. - ¿ Debemos , pue s, exam inarlo convencidos de e
14 En griego charadrids, probab lemente u n ave próx ima a l aleara- que hablas en serio?
vá n o el mismo alcaraván (charad r¡'us oed ícnemusi. ave frecuen te en el CAL. - To talmente.
S. d e Eu ropa . sob re todo e n el SE ., desde la p rimavera ha sta el otoño.
En lo s cr e púsc u los d esp liega gra n acriv idad para da r caza a lo s arrima -
les de que se a lim enta . Su voracidad debí a de ser proverb ia l. " Véase Rep. SOSc.
~I _ 7
98 DIÁ LOGOS GORGIAS 99
Soc . _ Sea; puest o qu e le pa rece así, contést a me con l'stá s a no y enfe r mo al mismo t iempo, n i ta m poco a l m is-
preci sió n. ¿ Ex iste a lgo a lo que lla m a s ci encia ? m o tiempo sale del es tado de salu d y de l de enfe r medad .
CAL. - Si. CAl. -¿ Oué quie re s deci r ?
Soc . -¿ No hab labas ahora también de cie rt a va len- SOC, - Po r ejemp lo, exa m in a se pa radame nte la parle
ti a que ha y ju nto con la ci e nci a? 1•• del c ue r po qu e quie ras. ¿Se puede pa decer la enferm ed ad 4 96a
CAL, - Sí hablaba. de los oj os c uy o nombre es of ta lmia ?
Soc. - ¿ No es cierto q ue habla ba s de do s cosa s a l d is- CAL. - ¿Cómo no ?
t ing u ir la va le ntí a de la cie nc ia? SOC. - Por su puesto qu e al mi smo tie m po no pued en
CAL. - S in duda . es ta r sa nos los ojos.
Soc. - ¿ Y q ué ? ¿ El place r y la ci e ncia son lo m is mo CAl. - De n in gu na man e ra.
o so n cosas distintas? Soc. - ¿Oüé suc ede c ua ndo secura la oft almia? ¿ Tam-
d CA L. - Cosas d is t in ta s. si n d uda. sap ie ntís imo hié n, en tonces, se pi e rd e la sal ud de los ojos y, fin a lmen-
Sócr a te s . te. se sale a l m ismo tiempo d el es tad o de sa lud y del de
Soc. - ¿ y la va lentía es di stinta de l place r ? en fermedad?
CAL. - Pues ¿cómo no? CAl. - En modo alguno.
Soc . - Tratemos, pu es, de reco rdar esto, que Ca licles Soc. - Es to resu ltarla, en mi op ini ón , sorp renden te y
Aca rn eo 71 ha dicho que el pl acer y el bi en son la misma a bs ur do, ¿ no es ci erto ?
cosa, y qu e la cienci a y la va lent ía son dis t in t as ent re sí CAL. - Por completo. b
y dis t int as del bie n. Scc. - Má s bie n. c reo yo, to ma u no y p ierd e el ot ro
CA L. - Y que Sóc rates de Alópece no e stá de a cuerdo ultema riva men te .
con noso t ros. ¿O es tá de ac ue r do? CAl. - As! es.
e Soc. - No lo está; y c reo que tampo co Ca licles c uan- SOC. -¿No s ucede lo mism o con la fue rza y la
do se ha ya e xa minado a si mis mo sincera me nte. Porque, dd Jilid ad ?
d im e, ¿ no cons ide ras que los que viven feli zmente e xpe - CA L - 5 1.
ri menta n lo con tra r io q ue los desgraci ados ? Soc. - ¿ y con la ve loc idad y la len t itu d ?
CAL. - Sí. CAl, - S in duda.
soc. - Po r tan to , s i es tas s it uaci ones son cont rarias Sóc. - Ta m b ién los bie nes y la fe licidad y s us cont ra-
en t re s i, ¿ no es p reci so qu e suc eda con ella s lo que con I ios, los ma les y la des gracia, ¿ no se tom a n a lte rnat iva-
la sa lu d y la enf e r medad ? Pu es, s in duda, un hombre no men te y a lte rn a ti va men te se p ie rde n ?
CAL - Ev ide nte ment e.
Soc. - Asi p ues, si e ncon tramo s dos cosa s q ue se pue- e
7~ Véa se. más arri ba. 49 1b. dun perder y tener al m ism o ti empo, es evide nte que no
77 Aca rn eo es el a dje tivo q ue desi gna a lo s pe rtenecientes al demo pod rí an s er el bien y el mal. ¿ Estamos de acue r do e n es-
de Achama i el m ayo r d em c de Ática. Para dejar constancia de una te srt-
lo ? Bxa m ínalo bien y conte sta.
l ica ción. s e añ a dí a a la m ism a el no mb re y el demo de l tes tigo. Asl, S6·
c ra te. ind ica el de mo d e Calic les Y. a co nt inua ci6 n, Calicles nomb ra a CA L. - Estoy com pleta me nte de a cu erdo.
S ócra tes pre ci sando e l de mo a que és te per te oec e.
100 DIÁLOG OS GORGIAS 10 1

soc. - Vo lvamo s a lo q ue hemo s co nve n ido antes. ¿ De- Soc. - Pe ro, no obstante. dices que es imposible ser
d as que ten e r h am bre es agradab le o peno so ? Ha b lo del a l mismo t iempo fe liz y desgraciado.
ha mbre e n s i m ism a. CAL. - Lo d igo. c ie r ta me nte. 497a
CAL. - Es penoso, pe ro co mer c ua ndo se t ie ne ha mbre Soc . - y ha s ad mitido q ue es pos ib le sen t ir p lacer y
es ag rada b le. do lor a l mi smo t iempo.
d SOC. - Ya com prendo; pero en todo cas o el hec ho de CAL. - Eso parece.
tener ham b re es, en sí mi smo, pen oso, ¿no es as l? Soc. - Luego sen tir p lacer no es se r feliz , ni sen ti r do-
C AL. - Asl c s. lor ser de sgraciado; por cons iguien te, res ulta el placer dls.
S óc . - ¿ No lo es ta m b ién lener se d ? I luto del bie n.
CAL. - Y m ucho. CAL. - No sé qu é sofi smas dices, Sóc ra te s,
SÓe. - Po r ta n lo , ¿sigo p reg unta ndo más. o estás de S óc. - S i lo sa bes. pe r o fin ges no en tende r, Calicl es;
ac uerdo en q ue toda necesi da d y lod o deseo es pe noso ? slg ue a ú n a dela nte .
CAL. - Es toy de acuerdo; no p regun tes. CAL. -¿ QUé tonte r ía vas a deci r?
Soc. - Bien; pero ¿no afirmas que beber cua ndo se tie- Soc. - Pa ra que con ozcas c uán s a bio e res tú qu e me
ne sed es ag radable? nmonestas. Al m ismo tie m po que cesamos de te ner sed . b
, CAL. - Sí. ¿ no deja mo s también de sentir -p lace r en beber ?
Soc. - Y en el es tado de que ha b la s. te ne r sed ¿ no es CAL. - No sé q ué es tás d ici e ndo .
indud ableme nte doloroso ? GOR. - No ob res asl de n in gú n modo, Cali cles; a l con-
CAL. - Sí. uurfo, respond e también en favor nuest ro. para qu e pu e-
SÓe. - Pe ro ¿ no es el beber la satis facc ión de esa ne - du ac a ba r se la con ve rs ación.
ces id ad y un p lacer ? CAL. - Siempre es Sóc ra tes el mi sm o, Gorgias; pregun -
.CAL. - Si. l a peque ñ eces sin valor y po ne a uno en evide ncia.
Soc . - ¿ No dices que en beber hay placer ? GOR. - ¿ y qu é te impo r ta? No res ide tu est imación de
CAL. - E xac ta me nte. ni ngún modo en estas c ue s t iones; pe r mi te a Sócrates qu e
Soc. -¿ Cua ndo se tiene sed ? ur gum e n te como qu iera.
CAL. - Si. CAL. - Pregun ta . pue s, tú esas menude ncias y rnez- e
SÓe. - ¿Con desazón por ella ? qul ndades . p uest o qu e le parece bie n a Go rg ias.
CAL. - Si. SúC. - Afortu nado e res, Calicl es, porqu e ha s sido ini-
Soc. - ¿Adv iertes, pues. la conclusión? Dices qu e se dado en los grandes mist erios Jo antes que en los peque-
s iente do lor y placer a l mi smo ti em po s i se bebe ten iendo nos: yo no ere¡ qu e e stuvier a pe r m itid o; en lodo caso. to -
sed . ¿O es qu e estas do s se nsaciones no se producen en ma ndo la c ues tió n don de la dejas te. respónd e me s i no ce-
el m ismo lug a r y t ie m po. sea d el c ue r po. sea del a lma. se- sa al mi sm o tie m po de te ne r sed y de se nt ir p lace r e n
gún prefi e ras, pues en m i opin ión no ha y di fe renci a ? ¿ Es be be r.
así, o no ?
CAL. - As! e S'
/
~,,,
. ,-
'I<J"~ ¡. _
~ -,~\ 11 Ceremo nia de ín iclación qu e ha b ia q ue hacer en Elc usls al e rnpc-
',,1' el o t oño , pt' ro que d e bla ir precedid a de
la de ini ciación en lo s _pe.

~
'~ 'e .' qucñ os mis ter ios », qu e se cele braba en Atenas al pri n cip io de la prim avera.

~
il~~.
102 DlALOGOS GO RG IAS 103
CAL - Si. SOc o- A nada , pero responde. 498a
S ÓC. - ¿No se cesa también de tene r hambr e y de e x- CAL. - Si, lo he vis to .
perime nta r los dem á s de seos a l mi s mo tiem po q ue ce san S Oc o- ¿ Ha s vis to s ufr ir y goza r a un homb re se ns a to ?
los pla ce res res pec t ivos ? CAL. - S i. .
CA L, - Así e s. S Oco- ¿ y quiéne s s ie nt en más e l go zo y la a flicció n,
Soc. - ¿ No es ci erto. pues , q ue a l m is mo tiem po ce- lus se ns a tos o los insensa tos?
d sa n los dolo res y los plac e re s ? CAL. - Creo q ue no ha y gran d ifere ncia.
CAL - Si. SOC . - Esto e s s ufici ente. En la g uerra, ¿ has vis to al-
Soc. - Pe ro. s in e m bargo. no se dej an de te ner a l m is- gu na vez a un ho mbre co ba r de?
mo t ie m po los bie ne s y lo s male s. seg ú n tú a d mitías an- CAL. - ¿ Có mo no ?
les; ¿ no lo a d m ites a hora? Soc. - ¿ y qué ? Al retir arse lo s e nemigo s, ¿ quién e s re-
CAL. - Sí, ¿y qu é? parece q ue se al eg r an más, lo s cobar des o lo s va lien te s ?
Soc. - Qu e no so n la m isma cosa, amigo. los bi enes y CAL. - Me parec e q ue uno s y otros se a legran m ucho; b
los placeres. n i lo son los male s y los dolores. Los u nos en todo caso, a pen a s hay d iferenci a.
se dejan de experiment a r s im u ltáne amente; lo s otros no, Soc. - No im port a. Así pue s, ¿se a leg ran tam b ién lo s
puesto q ue son di stintos. E n efec to. ¿cóm o podrían ser la co ba r des ?
m isma cosa los place res y los bi enes o los dolores y los CAL - Muchísim o.
males ? Pero, s i q u ieres, examín a lo también de este o tro Soc. - Tambié n los in sen satos , s egún parece.
modo; yo creo que n i aun así vay a es t a r de acuerdo co n- CAL. - S i.
e ligo. Po n a te nci ón: ¿ no llama s buenos a los buenos por la SOC. - Pe ro c uando se a ce r c an los e nemigos, ¿ su fren
pre sen ci a de bo ndade s, como bellos a aquellos en lo s que solam e nte los coba r des o ta m bi én los valiente s ?
e st á pre sente la belleza? CAL. - Unos y otros.
CAL. - SI. SOco- ¿ De igual modo ?
SOc o- ¿ y qué ? ¿ Lla m as bueno s a los ins ensato s y co- CAL. - Má s , quizá , los cobardes .
ba rdes ? Al me nos, ha ce u n mome nto, no; a l cont rario, lIa- S Oc o- y c ua ndo se re ti r an los e nemigos, ¿ no se a le-
m abas bue no s 70 a lo s decididos y a los de bue n juic io. ¿ O pran m á s ?
no llam a s buenos a é stos ? CAL. - Ta l ve z.
CAL. - S in nin guna du da. soc. - ¿No es c ierto, pue s, q ue s uf ren y se a le g ra n los
Soc. - ¿ y qué ? ¿ H a s vis to a lgu na vez gozar a un n iño sensa tos y los in sen sa tos, los cobar de s y los va lien tes , de
insen sa to ? ma ne ra a pro xim a da, seg ún afi r m a s, pero más los caba l" e
CAL. - 51 . de s q ue lo s valientes?
S óc . - ¿ No ha s visto nunca gozar a u n hom bre CAL. - S í.
insensa to ? SOco- Pe ro, po r otro la do, ¿ los sensatos y los va lie n-
CAL. - Creo que sí . Pero ¿a qué viene es o ? tes no so n buenos, y los cob ardes y lo s insensatos, malos ?

Ji v éas e 4\ll b .
104 DIÁLOGO S GORGIAS lOS

CAL. - SI. y c onside ra r dos y t re s veces la s cosas be llas. Deci mo s q ue 499a


Sc c. - Luego ¿sufre n y gozan casi en la m isma m edio so n bue nos e l se nsato y el va liente. ¿ Es así ?
da lo s buenos y los m a los ? CAL. - S i.
CA L. - Eso d igo. Soc. - ¿ y q ue so n ma los el insensato y e l cobarde ?
Soc. - As! pues , ¿so n cas i igualmen te bu enos y m a los CAL. - S in duda .
los buenos y los m al os ? ¿ O son incl uso mejo res los m a los ? Soc. - ¿ y por otra pa r te qu e es buen o el que go za ?
d CAL.. - Por Zeus, no sé lo que di ces. CAL. - S i.
S OC. - ¿ No sabe s q ue . se g ún a fi rmas. los buenos so n S oc o-¿Y m al o e l que sufr e?
bue no s por la prese ncia de bi en e s. y los m alos por la de CAL. - Forzosamente .
mal es ? ¿ Y qu e los bien es son pla ce res y los males so n Soc. - Pero ¿ no decimos q ue sufr e n y gozan ig ua lmen-
dolor es ? te e l bueno y el m al o y, quizá, aún m a s el malo ?
CAL. - S I. lo sé . CAL. - SI.
Soc. - ¿ Luego los que gozan tienen bienes, es to es, pla- Soc . - Por consiguiente, ¿ no resulta el m alo ta n malo
ceres, puesto que goz an ? y tan bueno como el bueno o mejor aun q ue el bueno ? ¿No
CAL. - ¿CÓmo no ? so n éstas y aq u élla s de antes las c oncl u s ion es que se de- b
Soc . - ¿ No so n bueno s por la presencia de bienes lo s d uc en c uando se afirma que son la m isma cosa lo s place -
q ue goz a n? re s y los bienes ? ¿ No es forzoso esto, Calicles?
CA L. - Si. CAL_- Ha ce t ie m po que te e sc ucho, Sócrate s, asintien-
Soc. - y los qu e s ufren ¿ no tie nen ma les. es to es, do a IUs palabras y m ed it a ndo que, a u nq ue por broma se
dolo re s ? le conc eda c ua lquie r cosa , te a garras conte nto a e lla c o-
CAL. - Asl es . mo los niñ os. Como s i t ú creyeras q ue yo, o c ua lq uie r o tro
e Sóc. -¿ Sos tie nes aun que po r la p resencia de ma les hombre, no juzgo que unos placere s son mejo r es y o tros
so n malos los m a lo s. o ya no lo sostienes ? peores.
CAL. - Si , lo soste ngo. SOC. - ¡Ay, ay , Cahc les! ¡Qué a s tu to eres! Me trata s
Soc. - En consec uencia, ¿ so n buenos lo s que gozan y co m o a un niño; unas veces afirmas q ue las mi sma s cosa s e
malos los que s ufre n? so n de u n modo y o t ras veces que son de o t ro, c o n el pro-
CA L. - Cierta me nte. pósito de e ngaña rm e. Sin embargo, no pens é yo a l prt nc í-
S oc . - l os que más , má s , los que me nos, m e nos , y los pio q ue iba a se r engañ ado int encio nadamente por ti , pue s
que igualme nte, igu almen te. e re ¡ que e ras a m igo; pe ro la verdad es que m e equi voqué
CA L. - S I. y que , según parec e , tengo, como d ice el a nt iguo pr eve r-
So c . - ¿No a firmas que gozan y sufr en de modo apro- hio, q ue po ner a m a l t ie m po buena car a y ac e ptar lo que
ximado los se n sa tos y los in sen sa tos, los cobardes y los tú me of re ce s . Al parecer, lo que ahora di ce s es q ue un os
valiente s, o incluso má s a ún los co ba r de s ? place res son buenos y otros malos; ¿no es a sí ?
CAL. - S I. CAL. - Sí.
So c. - Refle xiona, pues, c onm igo lo que r e su lt a de S6 c. - ¿So n, po r tanto, buenos los pla cere s útile s y d
nu estros razo nam ie ntos , pues dicen q ue e s be llo repetir m al os los perj~ dicia les?
106 DIÁLOGO S GORGIAS 107

CAl. - S in duda. hay prácticas qu e con duce n al placer procurando so lamen- b


Soc. - ¿ No son ú til e s lo s q ue producen a lgún bi en y le éste y de sconociendo lo que es mej or y lo que es peor;
malos los qu e producen algú n da ño ? a i ras, qu e d is t ingue n lo bueno y lo mal o . Ent re la s con-
CAL, - SI. duce nte s a l placer coloq ué la c u lina ria, ru tin a y no a r te,
Séc. - ¿ Te re fieres a placere s tales co mo aque llo s de y e n tre las cond unce n tes a l bien, el a rte de la med icina. Y,
qu e acabamos de hablar con relac ión a l cuer po , los de la por el dios de la a mis tad, Calicles, no creas qu e tienes que
comida y la bebida. y de e nt re és tos, los que procu ran sao bromear conmigo ni me contestes contra tu opin ión lo que
lud a l cuerpo o fue rza o cualqui e ra condició n propia. ésos se te oc urra, n i t a m poco recibas mi s pa la bras c reye ndo
son bu eno s. y los que prod uc en lo cont ra r io, ma los ? que b romeo, pue s ya ves qu e nuestra conve rsació n trata
CAL. - Cie rtame nte . de lo que cualqu ier hombre, a un de poco sen ti do, torna- e
e Soc . - ¿ No so n t ambién los d olo r e s, igu al m e nt e. u nos ría más en se r io, a saber, de qué mod o ha y q ue vivir : s i
bue nos y otros mal os ? de este mod o al que t ú me exhortas, que consi st e e n ha -
CAL. - ¿CÓmono ? ce r lo que, segú n tú. corres po n de a un hom bre, es deci r ,
S OC. - ¿ No hay, pues, que preferir y practicar lo s pla- hablar ant e el pueblo, ejerci t ar la retórica y gobe rnar del
ceres buenos y los dolores buenos? mod o que vosotros gobernáis ahora, o bien de este o t ro
CAl.. - Sin duda. modo de vida de d ica da a la filosofía , sa bie ndo e n qué es-
Soc. - ¿ y no los malos ? le modo aventaja a aq uél. Así pues, qu izá es lo mejor, co- d
CAl. - Claro que no . mo ya he in tentado antes , d efin irlos y, una ve z definidos
SOC. - En efec to. Polo y yo convinimos. s i tú lo recue r- y pu estos nosotr os d e acuerdo sobre s i exi s te n es tos do s
da s. e n q ue lod o hay que hacerlo bu scando el bien. ¿ Aca- géne ros de vid a , examinar en qué se dife renci a n y cuá l de
so p ien sa s tam bién lú que e l fin de ladas las acciones es lus do s debe p referirse. Quizá a ún no ent ie ndes lo qu e
el b ie n y que es preci so hace r tod a s las de más cosas po r d igo .
SOOa el b ien, y no és te por la s demás cosas ? ¿ Aña des el te rcer CAL. - No, po r c ie r to.
ve to a nues t ra opinió n ? Soc. - Te lo va ya deci r con más cla r ida d. Pu est o qu e
CAl. - SI. t ú y yo hemos con venido q ue ex is te n lo bueno y lo ag ra -
S6c . - Luego po r el bie n se de be hace r lo agrada b le da ble, y q ue lo agradable es dist into de lo bueno, pe ro que
y la s de má s cosas, pero no el bien por el placer. hay un a p rá c tica de ca da u no de ellos y u n proced imien-
CAL. - Exac ta me n te. to de a dqu is ició n, po r una pa r te la b ús queda del p lace r,
Soc . - ¿Acaso todas las persona s son ca paces de di s- po r o tra la del b ie n... Per o d im e, en p rime r luga r. s i es tá s
tingui r qué placeres so n buenos y qué otros son malos, de acue rdo en esto o no. ¿ Es t ás de acue rdo ? e
o es p reci so, e n cada caso, un hom b re expe r imen tado? CAL. - Sí.
CAl.. - Es preci so un hombre experimentado. SOC . - Continuemos; respecto a lo qu e a ntes decía yo
Soc. - Recordem os, pues, de nu evo, lo qu e yo decía "" a éstos , dame tamb ié n t u asentimiento, s i es que en tono
a Pol o y a Gorgias. Decía, en efe cto, si tú te ac uerdas, que ces te pareció que decía la verdad . Decía, po co má s o me -
Il O S, qu e la culinaria no me parece un arte , sino una r u ü-

'" v eese 4b4b . uu, a diferencia de la medici na , y añadía que la medicin a


108 DIÁ LOG OS G O RGIA S 109

SOla h a exam inado la na turaleza de aquello que c u ra, co noce el es. qu e es una d e la s ocupaciones que bu sca só lo nues-
la ca u sa de lo que hace y pu ede d ar razón de todo s sus tr o place r s in preoc upa rse de n ad a más ?
ac to s, a l con t ra r io de la c u lina r ia. qu e po ne todo su c ui- CA L - Me pa rece que sí.
dad o e n e l place r. se dir ige a este objeto s in ningún a r te Soc. - ¿ No te pa rece t ambién que buscan lo mismo to-
y. s in ha be r e xa m inado la natura leza ni la causa del pla- das las act ividades semeja ntes, po r ejem plo, tocar la e l-
ce r. es , por a s! d ec irlo. co m pleta me n te irrac iona l y s in c ál- ta ra e n los concu rsos? " .
culo. Solamen te gua rda por ru ti na y práctica e l rec ue rdo CAL. -SI,
de lo q ue habit ualm e nte sue le suced e r . por m ed io d el c ual Soc . _ ¿ y el ent rena m iento de los coros v y la co m-
b p rocura Jos placeres. Así pue s, e xa mina e n pr ime r luga r pos ición de los diti rambos ? ¿No te parece que están en
s i c rees que estas pa la bras son acertadas y si ha y ta m- el mis mo caso? ¿Crees que Cinesi as ", h ijo de Melot e, se
bién. respecto al alma. otras activida des semeja nte s, unas preocupa de deci r cosas q ue hagan mej ores a lo s q ue la s
s is te máticas. co n p revisión de lo m ejor c on respecto a l a l- " yen. o sola me nte de lo que va a agradar a la m ultit ud de S02a
ma, otras que no se preocupan de esto, si no que, como en espect ado res?
el c ue r po, buscan sola mente de qué mod o se puede pro- CAL. - Esto es evidente , Sócrates, respecto a Cinesias.
c urar el placer de ella, s in examinar qué placer es mejor Soc . _ ¿ y su padre MeIete ? ¿Crees que tenia en c ue n-
o peo r, ni preocuparse de otra cosa que de causarle ag ra- ta el bien c u a ndo ca nt a ba acompañado de la cítara ? ¿O
e d o, se a be ne ficioso, sea perjudicial. Yo creo, Ca licles, que ni s iqu ie ra tenía en cuenta el placer, pues mo le staba con
s í e xist e n es ta s a ctivi dades y a firmo qu e todo ello es adu. los ca ntos a su audi torio? Pe ro píénsa lo. ¿no crees que to-
lació n, se tra te del c u er po , d el alma o de c ualqui er otra llo canto con acompañam ien to de la ci tara y la comp ost-
cosa c u)'o place r se procure sin con side ra r lo be neficioso cló n de los diti ra mbos ha n s ido inve nt ados pa ra causar
y lo perjudici a l. ¿ Eres t ú del mi smo pa recer que yo acer- placer? ~.
ca de esto o dices lo contra rio? CAL. - SI, lo c reo.
CAL. - No, pero lo ac e pto, afin de que te r m ines es ta
conve rsación y pa ra co m p lace r ta m bién a Go rgia s.
d Soc. - ¿ y es ta ad ulación se produc e respe c to a un a l- 1I Pla tón. a l p recisa r - en 10 5 conc u rsos >, deja a salve e l va lo r qu e
ma sola , pero no res pec to a dos o a m uchas ? l.'nla la ens eñ a nza de la ci ta ra en la ed ucación de los a ten ien su .
fl Se ref ier e a lo s Jc jHio j chomí p ropios de la poes ta d ili rllmb ica .
CAL. - No, s ino también con relación a dos y a m uchas. l yH lodid llsJc a loi (m aest ro s de co ro s ci rcul a res ) es s inó nimo de poe ta
SOC. - ¿No es po s ib le ag rada r a l mis mo t iempo a mu - d itirá mb ico.
c has a lmas re u nidas s in preoc uparse de lo que es mejor II Cine sias, poe ta d itirá mb ico del fin a l del s ig lo " y p rinci p io s del
pa ra ellas? IV, Se le co nside raba en tre lo s poe la s respon....b les de la co rru pc ió n del
,tllira mbo, Ari s tó fa nes y ot ros co me dióg rafos lo ridlculie a ron , incl uso,
CA L. - Yo creo que si.
C'U su s c arac te res írs tco s. El comedióg raf o Stral is ti tuló co n su nom bre
Soc. - ¿ Puedes , e ntonces, deci r cuáles son las acti vi- un a comed ia. Platón es ta b a. s in d uda , infl u ido po r s u repugna ncia hacia
dad es que producen esto? Mejor a ún, si quieres, voy a pre· , "[(1 n ueva mÍls ic a de la q ue Cin es ia s e ra pion er o . Pa rece qu e o tra s ra zo-

gun ta r te, y s i algun a de la s que nombro t e parece qu e es II" S de co nd uc ta ex p lic a n la gen era l eve rs ión a ",. le perso naje. De su pa·

de las que lo co ns igue , dilo, y s i t e pa rec e que no, di que , ll'e, Melct e , dijo Pe réc rares q ue e ra el p eo r citaris ta.
" Resp ec to a l estado de s u bo rd in aci ón de la poe s(a a l gu sto de la
e no , En prime r lu ga r, tocar la flauta ¿no te pa rec e, Cali- muítitu d , v~a sc Rep. 493d.
110 DI AL OGO S G ORG IA S lit

b SOC. - ¿ Y a q ué a spira esa p oe sía g r ave y a d m ira ble. ta m bi én es tos orado res se dirigen a c om placer a los cí u-
la t ra ged ia ? ¿ Es sólo s u p ro pósi to y su em pe ño, co mo t ú dnda no s y, descuidando po r s u inte r és particul ar e l in te-
c rees , agradar a los especta d o re s o ta m b ién esfo rza rse e n rés público, se com po rta n c on lo p ue bl os como con niños,
ca llar lo p la ce ntero y agrada ble cu a nd o sea m al o y en de . Inte n tando s ola m ent e agrada rlos, s in p reoc uparse para
c ir y can lar lo ú til , a u nq ue sea mole s to. agr a de o no a los nada de s i, por e llo , les ha cen m ejores o peo res ? S03a
oye nt es ? ¿ A c uá l de es ta s dos tende nci as r esponde. e n IU C AL. - Tu pre gunta no es senci lla , pues a lgunos p ro-
opin ión. la tragedia ? nuncian sus di scu rsos in q uiet á ndose po r e l bien de los ciu-
CAL - Es ev ide nt e. Sócra tes, q ue se d irige m á s a l p la- da da no s , pero ot ros son como tú dices.
e cer y a da r gus to a lo s espectadores. soc. _ Es sufic ie nte. Pu es s i ha y estas dos cl ases de
Soc. - ¿ y no decí a mos a ho ra. Ca licl es, que esto es ret órica, una de e llas se rá adulaci ó n y ve rgo nzo sa orato-
adulación? ria popular; y hermo sa . e n cam b io, la o tra, la q ue procu-
CAL. - Cie r ta me n te. ra que las a lm as de los c iudadanos se hagan mejores y se
SOC. - Co nt in u em os; s i se q u ita de toda clase de poe - esfuerza en deci r lo más conveniente, sea a gradable o de-
sí a la melodía , e l ri tmo y la medida, ¿ no quedan solamen- sug radab le para los que lo oyen. Pe r o tú no has c o noc ido
te palabra s ? jamás esta clase de retórica; o bien, s i puedes c ita r algún b
CAL - f o rz osa me n te. orador de es ta espec ie, ¿ po r qué no me has d icho ya quién
Soc . - ¿ y no se pronuncian estas palabras ante u na rs?
gra n mu lt it ud. an te el pueb lo ? CAL. - Po r Zeus, no puedo nombrar a ninguno de lo s
Cu. -Sl. oradores. po r )0 m en os de los actuales.
Soc . - Lu ego la actividad poética es, en cierto modo , Soc. _ ¿ y qu é? ¿ Entr e los a ntiguos puedes cita r algu-
un a forma de o ratoria popula r. 110 por e l q ue lo s a te nienses h ayan t en id o ocasi ón de ha-
d CAL . - AsI parece. rc rs e m ejor es a ' par t ir de la p rimera vez q ue les d irigió
Soc. - Por co nsigu ie n te, se rá o ra to ria popular de ti - In pal a bra, habiendo s ido hasta entonces peore s ? Yo. cíer-
po ret ó r ico, ¿ o no crees q ue se comportan como o rado res m m ente. no conozco a tal o r ado r.
los poe ta s en e l tea tro ? CAL. _ ¿Có mo? ¿ No o yes dec ir qu e Te m ls toc les fu e un e
CA L. - SI, lo c reo. «iudadano e xcel e nte, y lo m ismo Cimón , Milclades y es te
SOC. - Pues a ho ra he mos e ncont rado un a forma de re- t'c r lcles. mue rt o ha ce poco, a q ui en tú m is mo has o tdo
tórica q ue se d irige a una m u lt it ud comp ues ta de niños, habla r ?
de m ujeres, d e ho m b res libr es y de e sclavo s, r e tó rica q ue SOc. - Si es una virtud verdade ra, Ca lic!e s , la q ue tú
no nos agra da m uc ho porqu e dec im os que es adu lación . de cías a ntes, la de sa ciar la s pro p ias pasiones y la s de los
CAL, - Sin d ud a . d em á s, e n ese caso t ienes r azón ; pero si no es eso, s ino
Soc . - Sigamos; ¿y qu é es , a nu est ro juicio, la ret óri- lo q ue a con tinuación nos vim os o b ligados a reconocer,
e ca que se dirige a l puebl o at eniense y a los pu eblos de otras 11 s abe r , q ue e l a rte es sat isfacer los deseos cuyo c ump lí-
ci udades, a los hombres libres ? ¿Pi ensas tú qu e los o ra- inten to hace mejor a l hombre y no los que, sa t isfe c hos, d
dores hablan siem pre para e l m a yor bien, te ndie ndo a qu e le hacen peor, ¿c rees qu e alguno de los qu e citas ha re-
los ci ud a danos se ha gan me jores po r s us di scurso s , o que uuldo es tas cond ici ones ?

112 DlÁLOGOS GORGlAS 113

CAL - No sé qué decir. Soc. - Precisamente. Pero ¿qué se produce en el al- e


Soc. - Pues si busc as b ien, h allará s re spuest a . Veá- lil a a consec uenci a del orden y de la pro porción? Procura
moslo del modo s igu iente, examinando poco a po co s i al- encont ra r y decir el nomb re, como lo ha s hecho en el
guno de e llos fue ta l com o de ci mo s. Vamos, pues; el hom- cuerpo.
bre bue no que di ce lo que dice te nien do en cue nta el ma- CAL. - ¿ y por qué no lo dice s tú mismo, Sócr a tes?
yor bien ¿no es ve rdad que no hablará a l azar, sino po- Soc. - Pu es, si te agrada más, lo diré yo. Por tu parte,
e n íendo su in tención en cierto fin? Es el caso de todos los si le parece acer tado lo que digo, dame tu asen timiento;
demás a r tesanos; cada uno pone a tención en su propia t-n caso cont rario, r e fú ta m e y no cedas. Yo c reo que al
obra y va añadiendo lo que añade sin tomarlo al azar, si- bue n orden del cuerpo se le da el nom br e de «saludab le»,
no procuran do que te nga una forma determinada lo que de donde se or iginan en él la sa lu d y la s otras c ondic¡o-
está ejecutando. Por ejem plo. s i te fijas en los pintores, ucs de bi enes ta r en el cue r po. ¿Es así o no?
arquitectos, constructores de naves y en to dos los de más CAL. - Así es.
a r tesa nos, cu al esquiera que sean, observarás cómo cada Soc. - y al bu en orden y co ncierto del a lm a se le da d
uno co loca todo lo que coloc a en un orden determ ina do ('1no m bre de norma y ley, por las que los hombres se ha-
y obliga a cada parte a que se ajus te y adapte a las otras, ren justos y ordenados; en esto consiste la just icia y la mo-
S04a hasta que la obra en te ra result a bien ordenada y propor- deración . ¿Lo ace pt as o no?
cionada. Igu almente los demás artesanos y ta m bién los C A L. - Sea.
que hemos nombrado antes, lo s que cuidan de l cue rpo, Sóc. - Así pues, ese orador de que hablábamos, el qu e
maestros de gim nas ia y médicos, ordenan y conciertan, ('S honrado y se ajusta al arte " di rigirá a las a lmas los
en cierto modo, el cuerpo. ¿Estamos de ac uerdo en que discur sos que pronuncie y to das su s acciones, poniendo
es to es as i o no? 1I11 intenci ón en esto, y dará lo que dé y qu itará lo que qu i-
CA L. - Se a as í. 11' con el pe nsam ien to puesto s iempre en que la just ici a
SÓc. - Luego ¿una casa con orden y proporción es bue - IIlIi'. Ca en la s a lmas de sus co nciudadanos y desaparezca
na, pero sin orden es mala ? lu injust icia, e n qu e se produzca la moderación y se aleje e
CAL. - Sí. In in te m pe r anci a y en que se arraigue en ella s to da vir-
Sóc. - ¿ No sucede lo mismo con una nave? tud y salga el vicio . ¿Estás de ac uerdo o no?
b CAL. - Sí. CAL. - Estoy de ac uer do .
Soc . - ¿ y también con nuestros cuerpos? Soc. - En efec to, ¿q ué util idad ha y, Calic les . en dar
CAL. - Desde luego. 11 un cue rp o en fermo y en mal est ado mu chos a limentos,
Scc . - ¿ y el a lma? ¿Se rá buena en el desorden o en lus más ag radables beb idas o cualquie r ot ra cosa, todo lo
cie r to orden y concierto? I'llU i en ocasiones no le aprov echará, según el re ct o JUI-
CA L. - Es preciso reconocer tambié n esto, en virtud r io , más que el carece r de ello, y aún le será menos prove-
de lo dicho an tes. c hoso ? ¿Es así?
Soc. - ¿ y qué nombre se da en el cuerpo a lo que re-
Ol . Se aj usta a l arte - tr adu ce a tech nikós; no se tra ta aquí d e na r·
sulta del orden y la proporción?
II U'Spra cuces . ya q ue, pa ra Sócrates, el fundamento de la ret órica e s la
CAL. - Quizá hablas de la salud y de la for taleza. ¡" ,(ida. v éanse 4/> la; 480a y ss .
(,1. _ ~
114 DIÁLOG OS GOR GI AS 11 5

CAl. - Sea . que no a n de n d e u n lado a o t ro d e sc abezados . Por c o n s i-


SOSa Soc . - No c reo, pu e s, q ue se a ventajoso para un hom- ¡,¡u icn te , co n tes ta t a m bié n a lo que falt a pa r a que nue st ra
b re vivir con el c u e r po en m ísero est a d o, p o rq ue el lo e s conve rsaci ón to me c abeza.
ta m o co mo vivir m isera b le mente . ¿No es a sí ? CAL - ¡Qu é te na z e r es. Sócrate s ! S i q ui e re s h ac e r me
CAL. - SI. ruso , deja e n pa z e st a co nve r sació n o co n tinúa la co n ot ro.
S c c . - ¿ y no e s ci erto que lo s mé d ico s . o r dína rtamen- Soc . - ¿ Qu é o tro quiere co nt in u a rla ? No d ebemo s de-
te , perm ite n a u n hombre sa no sa t is fa ce r s us d eseo s, por j,l r la d isc us ión s in te rmi na r .
ejem plo. co me r o b e ber c u a nt o q u iera , s i t iene ham b r e o CAL - ¿ No pod r ías co m p le ta rla t ú solo, b ie n co n u na
sed . pe ro a l e n fe r mo no le p e rmi ten cas i n u nc a sa ci a rse ex posició n segu id a . b ien p r egu n tá ndote y co nt e stándo te
de lo que d e sea ? ¿ Es tá s tú tambié n d e a c uerdo e n esto ? IU m ismo ?
CAL. - Si. SOC. - Pa ra q ue se me a p liq u e la fra se de E pic a rmo " t
b Soc o - ¿ No sucede lo m ismo res pecta al a lma. a mi go ? tille yo solo sea c apaz d e de cir Jo que an tes decian dos. S in
Mien tr a s e sté e nferma. po r se r insensa ta, in mode ra da, in- em ba rgo , parece absol u ta m ente p r eci so. Ha gá mo sl o a sí;
j u sta e impía . e s necesario p ri va rla d e s us d eseos e im p e- ~' t1 c r eo necesario que todos porfiemo s en sa be r c uál es
di rla que h aga otras cosas q ue aquella s po r la s que p ue- 1,1 verdad a cerca d e 10 qu e esta m o s t rat an do y c uá l el
d a mejorarse . ¿As ientes o no ? e r-ror, pu e s es u n bi e n común a todo s e l que esto lle gu e
CAL. - SI. l\ ser claro. Va y a co n tin u a r según m i modo de pensar ; pe- 506a

Soc . - ¿ Porque as¡ es m e jo r pa r a el a lm a mis m a ? 10 si a a lgu no de vo sotr os le pare ce que yo m e co n ced o


CAL. - S in dud a . lo q ue no es verdadero , d ebe toma r la palabra y r efu t a r -
Soc . - Pe ro priva rl a de lo que d e se a ¿ n o e s r ep ren - IlI C . T am poco yo h ablo co n la c erteza de que es verda d lo
de rl a ? qu e d igo , sino que inv e stigo j unt am e n te con vo sotro s: po r
CA L. - SI. cons igui e nt e. s i m e parece q u e m i co n t ra d ic to r m a nifie s-
Soc . - l u e go la r e p re ns ión e s mejo r p a ra e l a lma que III a lgo ra zon able , seré e l p rimero e n a ce p ta r s u o p inión.
e l d ese n f ren o , a l q u e t ú co ns id e r a b a s mejor a n tes . No o bs ta n te. di go esto por s i creéis q ue se d e be lle va r ha s-
e CAL. - No sé Jo q ue di ce s, Sóc ra tes; d irige tus pre gun - la el fi n la co n ve rs aci ó n; pero s i no q ue ré is , d ejé mo s la ya
ta s a o t ro . ~' vay ám ono s.
So c . - Est e ho m b re no so p o r ta q u e se le h a ga un be - GOR. - Yo c reo , Sócra tes. q ue no d ebe mo s irno s toda -
ne fi cio , a u nq u e se t ra te d e lo que est a mos h a bl a n do , d e vtn. s ino q ue tu t ien es q ue term in a r e s te ra zo n amien to ; b
ser rep ren dido. me parece q u e los d emás p ie nsa n lo m ismo . E n c uanto a
CA L. - No m e in t ere s a abso lu tamente n ada d e lo q ue mi , d eseo oírte di sc urri r sobr e lo que q ueda.
d ices, y te h e co n te st ad o por co m p lace r a Go rgra s. Soc . - Por m i parte, Gorgia s, hubiera co nve r sa do gus-
S oc . - Bien , ¿ Y qué vam o s a h acer ? ¿ Dejamo s la co n- rosa m enr e con este Ca licles h a st a qu e le h u bi e ra d evuel-
ve r saci ó n a m ed ia s ?
CAL. - Tú sa b rás.
S oc . - Pu e s dicen que no es justo dejar a medias ni ,. Resp ec to a la fra se de Epica rmo, v éan se KAJIII!L, fr . 253, DII!LS, l b,
d au n lo s c ue n tos, s in o q ue hay que ponerles ca beza, para Plató n cons ide ra a E píca rmo como e pr tnclpe de la co media _ (TUI. 152e)
116 DI ÁLOGO S GO RGI AS 117

to el pa saje de Anñ ón a cambio de l de Ze ta 87, pe ro pues- CA l, - Si gue hab lando, a m igo.


lo que tú, Calic les , no q u ieres term ina r c o nm igo la d iscu - Soc. - Pues d igo qu e si e l alma mode rada es bue na .
s ión a l me nos esc úchame e in te r r um pe , s i t e pa rece que I¡\ que se e nc ue n tra en situación contrar ia es ma la y ésta
e d igo algo qu e no sea verdad; y si me refutas. no me ir rita- ¡'S la q ue lla mamos insen sat a y desenfr enada. - Así es, s in

ré co nt igo. co mo tú conm igo. s ino que te ins c r ibiré co mo duda . - Y. ade más, el hombre moderad o obra convcnle n-
mi ma yor bienhechor. n-me nte con relación a los di oses y a los hom bres, pu es
CAl. - Habla tú solo. a migo. y te r m in a. no se r ía se nsa to s i h ici e ra lo qu e no se de be hace r. - Es b
Soc. - Asl pues, esc úcha me: voy a res u mir la d isc u- preciso qu e sea as í. - Y, sin du da. s i obra conveniente men-
sió n desde el princi pio. ¿ Acaso lo ag radable y lo bueno so n te respec to a los hom bres, obra con jus t ic ia, y s i respe c to
lo mismo ? - No son lo m ismo, se gú n Ca liclcs y yo he mo s u los d ioses. con piedad: y el que o bra ju st a y piado samente
co nve n ido. - ¿Se debe hacer lo agradab le a causa de lo pllr fue rza ha de se r justo y p iadoso , - Así es, - Y, ade-
bueno o lo bueno a causa de lo agrad a ble? - Lo agrada- más, tamb ié n d ecidido, pu es no es p ro pio d e un hombre
b le a ca u sa de lo bueno. - Pe ro ¿ no es ag radable aquello mod erado bu scar ni rehuir lo que no se d ebe buscar ni
d cuya p re sencia no s agrad a y bueno aq ue llo con c uy a pre- rehui r: a l con rrar¡o, ya se tra te d e cosas, hombres. place-
senda so mos buenos? - Sin duda. - Sin em bar go, ¿ no so- n-s o do lores, debe bu sca r o evi tar sol amente lo que es
mos buenos nosotros y todo lo qu e es bueno po r la pre- pr eci so y mantenerse con fi r meza donde es nec esario: po r e
se ncia de cie rt a cualidad? - Me parece qu e es forzoso , Ca - con stguíent e. es a bsolutamente forzoso, Calícles, que el
lides. - Por ot ra pa rt e. la condición propia de ca da cosa, hombre moderado, segú n hemos ex puesto, ya que es ju s-
sea uten silio, c ue r po, alma o t a m bién cualquier anim al, In, deci dido y piadoso, sea com pletamente bueno: que el
no se e ncue n tra en él con perfección por azar, sino por hom b re b ue no ejec u te sus acciones bien y conve nien te-
el orden, la rectitud y el arte qu e h a sido a signado a cada mente. y qu e el que o bra bien se a fe liz y a for t una do : y al
un o de ellos. -¿Es es to asi? - Yo afirmo que sí. - l ue go r-untra r-io, qu e se a desgraciado el perverso y qu e ob r..
la cond ición propia de cada cosa ¿es algo que está dispues- mul " : es te homb re es prec isamente tod o lo con tra r io del
e to y conce rtado po r el orden ? - Yo d iría que sí. - Así pues, mode rado, es el des en frenado a l qu e t ú a la ba bas.
¿es algún concierto conna tu ra l a cada objeto y propio de En tod o caso, yo es ta b le zco est o asi y a fir mo qu e es
é l lo q ue le hace bueno? -Esa es m i op inió n . - Y el a lma ve rdad. y s i es verdad, el qu e quie ra se r feliz debe bu sca r
q ue ma nt iene e l concierto que le es propio ¿ no es mejo r v prac t ica r, según pa rece, la mo de ración y hu ir dcl lib cr- d
que el al ma desorde na d a? - Necesaria me n te. - y s in d u- uuaje con lada la d il ige ncia que pueda, y de be proc u ra r ,
da , la que cons e r va este conci e r to ¿ no es concertada ?- ~ lJ h re todo, no te ne r necesidad de se r cas tigado: pe ro s i
¿Cómo no ha de se r lo? -Pe ro el alm a bien concer tada ¿ no élmi s mo o a lgún otro de sus a lleg ados o un particul a r- o
S07a es mo de rada ? - Necesa r ia men te. - Luego, u n al m a mo - In ciu da d necesita ser cast igado, es preci so que se le a pli-
de rada es bu ena . Yo no puedo deci r nada fr e nte a esto, que la pena y sufra el cast igo si qu iere lle gar a se r feli z.
amigo Calicles; pero si tú tienes algo que dec ir, inf ór ma me. h le es, en mi op in ión, el fin que se debe tener a nte los
~l Hay en eltexto g riego e xpres iones de dob le sen tidu qu e la tr aduc-
_1 Vo.'ansc 485e y. don de Calicle s a mo nes ta a Sócrate s con las mis · '10"" nO pu e de co ns ervar: eú , k a/{Js prd/le irl• • obrar bien . y «se r fel iz- ;
ma s pa labras q ue l eto a Anlión en la An tíopa de Eu rípides. A"ku" prál lein , co bra r mal . y <se r de s grad ad u >,
118 DI ÁL OGOS GORG IAS 119

ojos y, co ncen t r an do en é l to da s la s energía s de uno m is- Ya q ue e sto es así. e xa m inem os q ué es , en r ealidad , lo


e mo y la s del Es tado. obra r de ta l m od o q ue la just icia y 'l ile me ce nsu ras; s i e s vá lida o no la a fir mación de q ue.
la modera ció n acompañe n a l que q u ie r e se r fe liz. si n per- r-n efecto. yo no soy c a pa z de defe nder me a mí m is mo ni
m itir que los deseos se ha ga n irrep r im ibl es y. por in ten- l\ ni ng u no de m is a m igos y a llegad os. ni de li br a rm e y li-

ta r sa ti s fa ce rl os, lo que es u n m al in a ca bable. llevar una br a rlos de los má s g raves peligros, sino q ue, co mo los pr i-
vid a de ba nd ido. Pue s un homb re as í no puede se r g rat o vados de de re cho s ci uda danos, es toy a merced de l que
ni a o t ro ho m b re n i a ni ng ún d ios . po rque es inc a pa z de quie ra , s i gusta. abofete arme (to mo esta fo gosa ex pre s ió n d
co nv ivencia, y el q ue no es capaz de co nvive nci a tam poco .h- tu d isc u rso). des pojar me de mi s bien e s , dest err a r m e
lo e s de a m is tad. Dic e n lo s sabios, Cal ícles. q ue a l cielo. d ~' la ciudad o, po r ult imo. co ndenarme a m ue r te, y de que
SOSa a la tierra , a los d iose s y a los hom bre s lo s go b iernan la l'"'' s it uació n e s la más desho nrosa confo rme a t u s
conv ivencia. la a m is ta d. e l buen o rden. la moderación y pa labras.
la ju st icia, y por es ta r az ó n, a m igo. llaman a este conj un- Mi o pin ió n ya la he e xp re sado muchas veces, pero na -
lo ..cosmos . (o rde n) y no desorden y de senfreno. Me pa- da impid e dec irl a una ve z más. N iego , Cahcle s . q ue se r
rec e que tu no fijas la at e nció n en e stas cosa s, aunque eres abofe teado in ju st amente sea lo más des ho nroso, ni ta m -
sabio . No a dv iertes que la igua lda d geométrica tiene mu- I"->CO s ufr ir una a mputación en el cuerpo o en la bo ls a; al
cha im por tancia e nt r e los dioses y entre los hombres; pi en- ccnu-e r to. e s m á s vergonzoso y peor go lpear o a m p utar e
sa s, por el co ntrario. que es preciso fomentar la ambición, mi cuerpo o mis bienes , y t am b ién robarme, reducirme
porque des cui das la geometría . Y b ien. o te ne m os que re - . 1 la esclavit ud. roba r en mi ca sa con fractura y. en un a
b Iu tar el r a zona m ie nto de q ue los felic es son fe lices por la pa la b ra, hacer alg ún daño a m i per son a o a mi s biene s e s
adq u is ició n de la ju sticia y de la mode r ación. y lo s de s- peo r y m á s vergonzoso para el que lo come te q ue para mi
graciados so n des gr a cia dos por la a dq uisic ión de la m al- que lo su fro. Estas a firmaciones q ue. t al como yo las man-
dad , o, s i es ta o pi nión es verdadera. hay que considerar ren go, nos han re s ultado ev identes antes, e n la di scusión
cuáles so n la s consec uencias. Con e llo co nvien en. Calicle s, preced ente. están u nidas y atadas. aunque s ea un poco r u-
to das a q ue lla s afirmacio nes anterio res a pro pós it o de las do deci rlo , con razona mie ntos de hi e r ro y de a c e ro , po r 509/.1
c uales me pregunta ba s s i ha bla ba e n se r io " cuando de- lu menos. según se puede pen sar. S i no cons igue s des at ar-
d a q ue e s nece sario ac usa rse uno a s í m ismo, a un hijo los t ú u ot ro m á s impetuoso que t u no es posible habla r
o a un a m igo , si se co me te a lg ún del ito , y q ue par a es te ron ra zó n s ino hablando co m o yo lo ha go, pue s mi s pa la -
se de be usa r la ret órica. Por cons igui en te , lo q ue t u c re tas bra s so n s iem p re la s m ism as, a sa ber: q ue ign o ro cómo
que Pol o hab ía acepta do po r ve r gü en za era verda dero, a ..un e stas cosas, pe ro. s in e m bar go , sé q ue ningu no de
saber, q u e com e te r inju sti ci a es tan to peor que sufrirla aq ue llos con lo s q ue he conve rsado, co mo e n e s ta ocas ión
e porque es más de shonroso ; y ta mbién que quien tien e el r-on vosotros, h a podido hablar de o t ro modo s in r e sulta r
pro pósito de se r rea lm ente o r ador ha de ser ju sto y co no - r idículo . En lodo c aso, yo establezco otra ve z qu e esto es
cedo r de lo justo; co nc lusión que, a su vez, decía Pol o 'IV así; y si es a s í. y la in justicia es e l mayor m a l para e l qu e b
qu e Go r gia s ha bi a aceptad o por vergüe nza . In comete, y si e l co m ete rl a y no pagar la pena es mal aun
mayor, si e llo es posible, q ue ese mal tan grande, ¿c uá l
, o V i:a s ~ 481 , .
' 0 Véase 46 1b.
st-rta e l aux ilio q ue, de no poder p re s tá rs e lo a sí mi smo,
120 DIÁLOGOS GO RG IA S 121
ha r ía a l hom b re verdad era mente digno de ri sa ? ¿ No es CAL - Sin d uda.
acaso aquel que puede a pa r ta r de nosotros el más grav e Soc. - ¿Cuál es, pue s, el a rte que p repa ra para no s u-
da rlo ? Por ta nto, no po de. presta rs e a si mismo o a los a mi- I! ir inj u st icia o suf r irl a en grado mínimo ? Cons ide ra s i
gas o all egados esta cl ase de a ux ilio es, fo rzosamente, la 11: parece el m is mo que me parece a mi. Yo creo que es
ma yor verg üe nza; viene en segun do lugar el auxilio que el sigu ien te: o es preciso gobernar un o mism o en la c iu-
co rresponde a un daño d e segun do o rd en; en terce ro , el dad o te ne r el pode r a bso lu to o se r amigo del gob ierno
e qu e corres po nde a u n da ño de te rce r orden, y as í sucesi- e xisten te.
vame nt e; e n rel ació n co n la ma g ni tu d de l daño es tá e l de- CAL _ ¿ Ves, Sóc rates, cómo estoy di spuesto a a la ba rt e
co ro q ue trae el pod e r prest ar el a u xilio. y la vergüenza . i d ices al go ra zona b le ? Me pa rec e muy b ien lo qu e has b
de no pode r p rest arlo. ¿ Es asl o de o tro mo do , Cal icle s ? dic ho .
C AL - Así e s. Soc. - Exa mina s i t ambién lo q ue vay a dec ir te pa re-
Soc . - Cons iderados es tos dos males: corne te r injus- 1"1" bien. Cr eo que es a mi go de otro e n el ma yor grado pe-
tici a y s u fr irl a , decimos qu e el mayo r m al es come terla aible, como di cen [os an t iguos y los s a bios, el se meja nte
y el menor, su fr irla . ¿Con qu é me dios po dr ía un hom bre de su semejante. ¿ No lo crees tú también ?
a m pa ra rse a sí mi s mo, de ma nera que posea estos do s re- CAL. - SI.
d medios, el que le a parta de comete r injusticia y el qu e le S Oco- Por cons iguient e, donde mande un t irano fer oz
libra de sufri rl a ? ¿ Es el pode r o la voluntad ? Qu ie ro de- l'ined ucado, s i hay en la ciudad alguien m ucho mejor que
cir lo s igu ient e: ¿si tie ne el deseo de no su fr ir inju s tici a él, ¿ no le t emerá, de cierto, el t irano, sin pode r ser jamás e
no la su fr irá. o sólo de jará de sufr irl a en e l caso de que eíuce ra me nte a migo suy o ?
se proc u re un po der que le libre de este mal ? CAL. - Así es.
CA L - Es e viden te q ue s i se procura un poder. Soc. - y s i hay a lgu ie n m ucho peor, tampoco el ti ra-
Soc. - ¿Y res pect o a comete r inj u stici a ? ¿El no qu e- 110 se rá s u a m igo, pu es lo despreci a rá y ja más se intere-
re r comete rla le ase gura de qu e no la come terá. o también aa rá po r él como por un amigo .
e pa ra esto es prec iso que se p roc u re a lgún pod e r y cie rt o CAL. - Ta m bién es to es verdad .
a r te, de manera que, s i no lo ap re nd e y ej ercita, come te rá Soc. - No queda, pu es , más amigo di gno de me nci ón
inj us tic ia? ¿ Por qué no me respondes a es to, Calides ? para él qu e el de s us m ismas co stumbres, el que a la ba y
¿Crees o no que nos hemos vis to forzados por la razón Po- ce ns ura lo mismo q ue él a laba y censu ra, y está d lspues-
lo y yo. e n la conve rsación a n te rio r, cua nd o nos pus imos tu a dej arse ma nd a r y a some te rse a él. Es te es el qu e ten-
de ac ue rdo e n que nadie obra ma l vo lu nt a riament e, s ino d rá gran poder e n esa ci udad y nadie le da ñará impune- d
q ue todos los que ob ran inju sta men te lo hace n contra s u men te. ¿ No es asf ?
vo lu n tad ? CAL. - Sí.
5 lOa CAL - Se a así , Sóc ra tes, a fin de que termines la SOC. - Asl pu es, s i en es a ciudad a lgún jov en medit a-
conversación . ra: «¿ De qué modo alca nza r ía yo gran po de r y queda rí a
SOco - Luego tambié n, según parece, es preciso adqui- 11 cub ie r to de tod a injus tici a ?», ten d r-ía , según pa rece, es-
r ir cie r to po de r y cierto a r te para ello, a saber, para no te cam ino: ac ostum bra rse ya des de joven a a legra rse y dis-
come te r injusticia.
122 O¡ ÜOGO S G ORG I AS 123

gu starse co n las m ismas co sas que su dueño y procu ra r Soco - ¿ Pe ro qué. am igo ? ¿Ta m bién el arte de na da r
hace rse lo más semej a nte a é l. ¿N o e s a sí? n a tu juicio respe t ab le ?
CA L. -51. CAl-. - No, po r Ze us.
Soc. - Por ta nto , és te ha br á conse guido p le nament e SOco - Y, sin e m ba rgo. tambié n sa lva a los hom b res
e en la ci udad que no se le haga injus tici a y ha b rá a lcanza. dt· la mu erte c ua ndo se e ncue nt ra n en ta l s it uació n qu e
do g ran po de r. segú n vues tr a o pi n ión. r ~ preciso es te conoc imie nto. Pe ro s i te pa rece delezna -
CAL. - Exacta mente. hle, va y a ci ta r otro de ma yor impor ta ncia: la nav egación , d
S oc o- ¿ Pe ro ha b rá conseguido también no come te r in- arte que no sólo salva las vidas de los más graves pel igro s,
jus tic ia ? ( O bien esta rá m uy lejos de ello. pu es to que es sino también los cue r pos y los bien es, como la re tóric a .
se meja nte a s u dueño. qu e es injusto. y él t iene gran po- lumbien es te a r te es humilde y mod esto y no ado pta u na
de r al iado de éste ? Yo creo qu e, po r el cont rario, es ta sí- uf titud orgullosa como si hici era algo magnífico, s ino q ue,
tu aci ón le pe r mitirá come te r el mayor número de inj us ri- llevando a ca bo lo m is mo qu e la orat oria foren se, s i nos
cias s in s u fr ir ca s tigo. ¿Es así? tr ae a sa lvo desde Eg ina, cob ra, según c reo, dos óbo los;
CAL. - As í parece . \ i desde Eg ipto o desde el Pont o, por este gran beneficio
Sl la Sóc . - Por cons igu ie nt e. a éste le sobrevendrá el ma- 11(' haber salvado lo que ac abo de decir, nue stra vida, nues- e
yor mal. puesto q ue su alma es pe rve rsa y est á corrompi- uos hijos . bie ne s y muj eres, al desem barcar en el puerto
do po r la imi tación de su du eño y por el poder. 110 :0; cob ra, co mo má ximo, dos dracmas; y el que posee es-

CAL. - No sé cómo ca mb ia s s iem p re d e a rriba a ba jo lt· <I r te y ha llevado a cabo es tas cosas, ya e n tierra, se pa-
lo s razon amientos. Sócrates; ¿o no sabes que el que imit a sea po r la o rilla del ma r junto a su nav e con aspec to mo-
a l tiran o ma ta rá, si q uie re. al q ue no le imita y le despoja. ties to. Po rqu e, e n m i op in ión, es te ho m bre sabe reflex¡o-
rá de s us bienes ? llar que es im pos ib le co noce r a qui én es de s us corn pañ e-
b Soc. - Lo sé, am igo Ca lid es. a me no s que sea sordo. 1li S de navegación ha hecho u n be neficio evi tan do que se
po r oír te lo deci r a ti m uc ha s veces ~1 y, a n tes q ue a t i, a hu nd ie ran e n el ma r y a qu ién es ha causado un da ño , ya
Polo y a ca s i tod os los habitante s de Atenas; pe ro esc ú. que t ie ne la certeza de que no salieron de s u na ve e n me- SI211
c ha me a hora t ú; digo q ue lo ma tará, si q u ie re, pero mata- jcr es tado q ue cua nd o en t ra ron, n i e n c ua n to a l c ue r po
rá un mal vado a un ho m bre b uen o y hon rado. ni en cuanto a l alma. Así pues. refle xiona él q ue s i un hom-
CAL. - ¿ y no es es to precisa ment e lo ir r itan te ? bre a t ac ado po r enfe r medades graves e incu ra bles no se
Soc. - No lo es, por lo me nos para un hombre se ns a- ha a hogado, éste es un desgraci ad o por no hab er mu erto
to, según de mues tra nues tra conversación. ¿O c rees lú qu e y 110 ha recibido de él ningún be nefici o, y qu e s i alguno
un hom bre debe bu sca r, sobre todo, el medio de viv ir el lie ne e n e l a lm a, parte más p reciosa que el c ue r po, mu -
ma yor t ie m po posi ble y eje rcita r es as a rtes que nos van chos male s in cur ables. a és e no le co nviene vivir. ni le ha-
e s alva ndo s uc es ivamen te de los peli gros, como la que tú re él un benefi cio al salva rl o del mar, de un juicio o de
me invitas a prac tic ar, la ret órica que nos sac a a bien en l•-ualq uier ot ro peli gro, pues sabe que para un homb re ma l- b

los tribuna les ? vad o no es 10 mej or vivir, ya que es forzoso que viva mal.
CAL, - Sí, po r Zeus, y sin duda te doy un buen con sejo . Por es ta razón, no es costumbre qu e el piloto de una
" Vt!a se 483b; 486b ·c y 466b·c. lla ve se ufane, a pesar de que no s sa lva la vid a, ni ra mpo-
124 mÁ LOGQS G O RGIAS 125

ca , admirable Cal ícles. que lo haga el co ns tructo r de m á- temu político del pals en que h a bite, y en ese caso es pre- 5131.1
quinas de guerra, q ue a veces puede sa lva r cosas d e no d\lJ que tú ahora te hagas lo más semeja nte pos ible al pue-
me nor im po r tancia , no d igamo s ya que u n p ilo to, s ino que hlu atenie nse, s i q uie re s se ri e ag radable y te ne r gran po-
u n gene ra l o cualq u ie r otra persona , pues en ocasiones ,1" 1" e n la ci udad . Considera, a migo, si es to es ú til para ti
sa lva ciudades e nte ras. ¿Te parece q ue está al mi sm o ni. V pa ra m i, no s ea q ue nos s uceda lo que, según d icen, su-
v~ 1 qu e el o ra dor de foro ? Y, sin em ba rgo. Ca licl es, s i qut- " 'tic a las m uje res tesa lia s qu e hacen desce nd er a la
e sre ra ha bla r com o vosot ros, ensalzan do s u profesión , os luu u ", est o es, qu e la pos es ión de es te poder en .la c íu-
a ne ga ría con s us fra ses , h ab lán doo s y exhortándoos a ha. ¡lll tl sea al preci o de lo más querido, Si tú cr ees qu e a lgún
ce ros cons tr uc tores de m áq ui nas porq ue las demás pro- luuubre puede e nse ña r te un arte ta l qu e te haga pod e ro-
fesio nes n o son na da; ciert am ente hall aría razones a pro- _o i-n esta ciudad, a u nque seas d is t in to de los que go bie r- b
p iadas qu e decir. Pero. no ob s tante, tú por eso no le des- 11 11 11, sea e n mejor, sea e n peor, estás equivocado, Cahcles.
precias meno s a él y s u a r te y le lla maría s «cons tr uc to r HW.J1l yo c reo, En efecto, no es s u ficie nt e la imita ción, si-
de máq uinas .., como u n insulto; no conse nt ir ías e n casar 1111 que t ie nes q ue se r por natura le za igual a ellos, s i qu ie-

a tu hija con un hijo s uyo, ni t ú te casarías con s u hija, I l' " hacer algo a u té ntico pa ra adquir ir la am ist ad del pue-

Sin embargo, vistos los motivos por los qu e en salzas tu hl" de Aten as y también, por Zeu s, la amistad de De mo,
oc u pación, ¿con q ué fun damento razona ble de spreciarías hiju de Piri la m pe s. As í pues, el que te haga igual a ellos
a l cons t ructor de máqu in as y a los o t ro s de los que hab la. 11' hará tamb ié n. co mo tú de se a s, po lu lco y o rado r, por-
d ba a ho ra ? Yo sé qu e vas a deci r q ue eres mejo r y de me. '1ll C a tod os los ho mbres les a legra qu e se ha ble con arre-
jo r linaje, Pe ro s i ser mejor no es lo que yo di go, s ino qu e Mio ti s u pe nsamiento y se irrit an por lo cont ra r io; a no e
la vir t ud en s í misma cons is te e n salva rse uno m ismo y , \' 1" que tú di gas ot ra cos a, qu erid o amigo. ¿Tienes a lgo

salva r lo suyo, co mo qui era qu e uno se a, resulta r idíc ulo 'lile decir a esto, Ca licl es?
tu de sprecio del cons tructor de máquin a s, de l méd ico y C AL - No sé por que me parece qu e tie nes razón , 56·
de cu a ntos ejercen todas las demás a r tes que han sido , 1 ates; pero me s ucede lo que a la m ayorí a, no me con-

c readas p a ra preserva rnos de los peligros, vr-nzc del todo.


Pero, a migo mío, mira si lo generoso y lo bueno no es Soc. - E l a mo r del pu e blo, s in duda, Ca licle s, arrai-
a lgo di s tinto del p re servar a los de más de los peligros y gndo e n t u a lma me hace fre nt e; pe ro s i exa minamos re-
p.reser va rse uno m ismo de ello s, Pues, ciertamente. el vi. peüda mente y mejor es tas m ismas cues t iones, te co nven- d
e vtr m ucho o poco t ie mpo no debe p reocupa r a l que, en ver. ¡ r-rás. Recue r da , p ues, que hemos establec ido dos p ro-

dad, es hombre, ni debe éste te ne r e xcesivo apego a la vi. l cdi míe ntos ... para c ult iva r cada una de es tas dos cosas,

da, sino que, remit iendo a la d iv in idad el cuida do de esto e-l c ue rpo y el alma; uno consiste en vivir pa ra el placer;
y da n.do crédito a las m uje res v, que dicen que nadie pu e- (,1o tro e n vivir para el mayor bie n, s in ceder a l agrado,
de e vita r s u des tino, debe seguida me nte exam inar de qué duo, a l contrario, lu chando con e ne rgía , ¿N o es es ta la
mo do. lI ev~rá la vida más conve n iente du rante el t ie m po d is tin ci ón qu e he mos hecho a n te s ?
que Viva, S I por vent ura lo consegu irá ada pt á ndose al si so
") Las de d icadas a la ma gia . Era fa ma que acab a ba n por perde r la
91 Se refi ere q uizb a al gú n ref rán o dic ho d e uso co mún, la l vez a l a~ piern as ,
vlsfu y que se les q ued a ban in ú ti les
u na cita li te ra ria muy gene ra liza da que no es posib le p re cisa r, ,~ Véase SOOb.
126 DIÁLOGO S C O RG IAS 127
CAL. - E xac tamen t e. mérito, e ntonces seria insensa to, si n duda, em p render la s
SOco- Luego un o d e est os p rocedimientos. el que b us- edificacione s pú blicas y e xhor ta rnos recíp ro came nte a
ca el placer, es in noble y nad a más qu e pura adulac ión; 1"110. ¿ Debemo s dec ir que es tas p alabra s son razon a b les d
¿es cie r to ? 11 1I0?
~ CAL - Lo conc edo . si t ú Jo deseas. CAL. - SI. des de luego.
56<: . - El otro procu ra qu e alcance la m ayo r per fec - Soc. - y as í sucede con todo. Si, por ejem plo, in ten-
ción lo que c u lt iva mo s. se a el c ue r po , se a el a lm a. tara mos eje rcer un se rv icio publico y no s a nimáramos re-
CA L. - S in dud a . d procame n te e n la creencia de que somos médi cos ca pa-
SOc o- Po r cons ig uien te . ¿ no debemos in te nt ar- aten- \' , ' S , sin duda nos e xa mina r ía mos el uno a l otro. Veamos,
der a la ci udad y a los ciudada nos de man e ra que los me- po r los di oses, dirías tú, ¿c ómo a nd a de s a lud el p ro pio
joremo s e n e l ma yo r grado pos ib le ? Pues s in est o, seg un Súc ra tes ? ¿ Ya alguna otra pe rsona, esclavo o libre, ha ven-
he mo s vis to a ntes, no t ien e ning u na ut ilidad el p roporcio- "ido la e nfe rme dad por int e rve nci ón suya ? Igu almente yo,
5 14a na rles a lgú n ot ro ben efi cio, s i fa lta la recta y honrada in- xiu du da, ex a m ina r la otras cos as semejantes acerca de ti ,
te nci ón de los llamados a adqu ir ir gr a ndes r iquezas, al- y si ha llá ba mos que por nu es tra in te r venci ón no se había e
gún gobie rn o so bre a lgu ie n o c ua lqu ie r otra clase de po· curado n ad ie, ni forast ero ni ciudad a no, ni hom bre ni mu -
der. ¿Debe mos estable cer qu e es asl P In , po r Ze us, Calicl es, ¿no se r ía, en verdad , ridíc u lo lle-
CAL - Des de luego, s i es t u gu sto. ftllr a tal grado de ins en satez que , ant es de haber hec ho
Soc. - Si, en efec to, tú y yo nos e xhort á ra mos red pro- t-n pr ivado nume ro sas pr ue bas, con el éx ito qu e fue se, y
ce men te para oc upa rn os de lo s asuntos pú blico s e n la s untes de rec t ifica r mu chas veces y eje rcitar suficie nte me n-
edificacion es: la s gra nd es cons tr ucciones de m uralla s, a ro u- el a r te, in te n táramos, como d ice el prove rb io , a p re n-
se na les y te m plos, ¿ no se r ía preci so que nos ex am in ára- dcr la cerám ica fa b r ican do una t inaja ~ y t ra tá ra mos de
ma s noso tros m is mos y nos pus iéra mos a prueba, e n pri- eje rcer un cargo pu b lico y e xho rt á ramos a ello a otros que
b mer luga r, so bre s i conocemos o no el arte de la edí ñca- es tán en las mi smas condiciones? ¿No te pa rece a bs u r do
ción y con quién lo hemos a prend ido? ¿Seria preciso o no ? libra r de es te mod o ?
CAL - Sin duda , CA L - Si. SISa
Soc . - En seg undo luga r, seria necesario considerar SOC. - Pues ahora, excelente amigo, pue sto que tú ha s
si e n alguna ocasión hemos const ruido algún ed ificio pa r- empezado h ace poco a oc u parte d e lo s negoc ios públicos,
t icu la r para a lgún a migo o pa ra noso t ro s y si es te edífí- y puesto que me invitas a m í a ello y me ce nsu ras porque
ele es bello o feo ; e n el caso de que, e n estas indagacio- 110 lo ha go, ¿no nos e xaminare mo s u no a o t ro p reg u ntan-
nes, ha lláramos que nues t ros maes t ro s ha n s ido háb iles donos: vea mo s, ¿ ha hecho ya Calicles mejo r a a lgú n ci u-
e y fa mo sos y que nosot ro s he mos cons t r u ido m uchos y be- dadano ? ¿ Hay a lguno que, ha b ien do si do a ntes ma lvado ,
Ilos ed ificios, p r imer o bajo s u d ir ecci ón y despué s solos, injus to, dese nfre na do e insen s a to, po r in terv ención de Ca-
c ua ndo ya nos ha bíamos se pa rado de ellos, só lo e n es ta s helee se ha ya hecho bueno y honrado, sea fo ra stero o ciu-
co ndici ones podrí a mos, con bue n se nt ido, emprend er las du duno, es clavo o lib re ? Dim e, si te pregu n ta n esto, Cali- b
obras pú blicas; pero s i no pudié ramos nom brar ni ngún
mae stro, ni most rar nin gún edificio, o mostrar muchos sin " Las ideas sen las mis mas q ue e n Laqu es 187b.
128 DIÁLOGOS e O RG JAS 129

el es, ¿q ué responderás ? ¿A q u ién dic es que has m ejorado ber establecido por vez p r imer a estipendio s para los ser-
con t u compañía ? ¿ Por qué no te de ci des a con testa r, s i vlcios pú blic os " .
en r ea lidad tie ne s a lgu na o bra de c ua ndo aún e ras pa rti- CAL. - Eso se lo o yes decir a los de la s o rej a s
c u la r. a ntes de de dicarte a la po llti ca ? ra sg adas <n.
CAl.. - Ere s di scutidor. S ócra te s . soc.- Pe ro esto no lo he o ído, s ino que sé con cer te -
Soc. - Pue s no te pr egu nto po r a fá n d e d ispu ta r , s ino IU, lo m ismo q ue tú, q ue a l pr inci pio Pe ri cles go zó de g ra n
porque deseo sa ber de qué modo crees , rea lm en te, que se rep u taci ón y que lo s at e nien se s, cuand o eran m al o s, no
debe tomar pa rt e en la vida pública en tr e no so t ro s. ¿O te vota ro n co nt r a é l ninguna se ntencia infa m a nt e; pero des-
va s a oc upa r de otra cosa cuando llegues a l go bie rno de pués q ue por o bra s uya se hic ie ro n buen os y hon r a do s,
e la c iuda d y no, so b re todo, de q ue los ciudadanos seamos ya al final de su vida, lo co nde naron po r malversación y 5 16a
lo mejor po si b le ? ¿N o hemos conve nido repel idas ve- lid ió poc o para que lo cas t iga ran con la m uert e , e vidcn-
ces que és te es el deber del poln tco z ¿ Lo hemos co nve ni- rem ont e porq ue, en o pinión de e llos, e ra un ma l eluda-
d o o no ? Res po nde. eSí, lo hemos co nven ido», co ntesto e n lla no - .
tu nombr e. Pu e s b ie n, si e s to e s lo que un ho m b re bueno CAL. -¿ Y q ué ? ¿ Por esta razón era malo Pericles ?
debe proc urar a su ci u dad, recor dando lo d ich o di m e si Soc. - Po r lo menos, a l o br a r de es te modo un e ncaro
te sigue pare cien d o que han sido b ue nos ciudada nos aque- lia do de cui dar asno s , caba llos y bueye s, parec erla m al o
llos que ci tabas hac e poc o: Pe rí cles. Cim ó n, Milcl ade s y s¡ cua ndo lo s to mó no le coceaban, co rnea ba n n i mo rdí an,
d Temtstocle s. V é l dejó que se ac ost umbra r an a ha ce r cerr tlme n te t od a s
CAL. - De sd e lu e go que sí . es tas cosa s; ¿ no te pa rece ma lo todo guardiá n de a nima- b
Soc. - Asl pue s, s i han s ido bueno s , es e vide n te q ue h-s q ue tomándo lo s mansos los hacem ás ce rriles qu e cuan-
ca da uno de ellos haría a los ciud adanos mejore s de lo que do los to m ó? ¿Te pa r ec e malo o no ?
e r a n a ntes. ¿H ael an esto o no ? CAL. - Te diré q ue s i para darte gusto.
CAL. - Si. Sc c. - Pu e s b ien, co mp láce me tamb ién respondiendo
S6 c. - Po r cons iguien te , c ua ndo Pericles empe zó a ha- u es to: ¿ la es pecie hu mana e s o no u na es pecie anima l?
blar a l pue b lo, ¿ no e r an los a te n ienses peores que c ua n- CAL - ¿Cómo no?
do pronunci ó s us últim o s di scursos ? Soc . _ ¿ No eran hombres los que ten ia bajo s u c u ida-
CAL. ....... Ta l ve z. do Pe r id es ?
S6c. - No val e dec ir «ta l vez>, excele nt e Ca líc le s . por- CAL. - Sí.
q ue ell o e s de nec e sidad, segú n 10 que hemos convenid o, SOC. _ ¿ Y qué? ¿ No era pr eci so. segú n ant es hemos
s i de ve r da d é l e ra un buen ci udada no . • onvenidc, q ue. por su in tervención, éstos se hicie ran m á s
~ CAL. - ¿Qué quieres de ci r ? ... Re tri bucionu a lo s co mpone n les d e lo s ju ra d os , a los miembros
Soc. - Nada, pero d im e. a de má s, si la o pinió n ge ne- .Id Consejo e, incluso. a lo s so lda do s.
ra l es q ue los aten ienses se ha n m ejorado por ob ra de Pe - ." Lo s p ar tid arios d e lo s lacede mon ios, c u ya s cos tu mb res im ita ba n.
r -icles o , por e l co nt r a r io, q ue han s id o co r r om pidos por 1:1 . ¡'ro/ágo ras 342b.
.. Es ta id ea sob re Pc rid es es tá e n dcsa c ue rdo co n el elo gio q ue de
é l. Pues yo o igo deci r q ue Per icles ha hecho a los a te nien-
d IHICe Tucftunu s (11 65), q ue da s u opi n ión so b re el mo tivo d el proc eso
ses pe r ezosos, cob a r de s, charl atane s y a variciosos a l ha- ~ ufh-m a que e ra inco rru p tib le.

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e jus tos de lo qu e an tes e ra n, s i es verdad que él, qu e los 11 hubiera n si do bue no s po líticos, como t ú d ices, jam ás
gobernaba. e ra u n bu e n poJitico ? 1" ", hubiera ocurri do esto. Pue s, de cierto, no s uc ede qu e
CAL - Cie r ta me n te . 1m bu e nos a u r igas se mante nga n a l principio e n los ca -
s oc. - y bie n, los ju s tos son de ánimo pací fico. segú n hIlitos , y que cu a ndo los han domes t icado y ello s mi smo s
d ijo Home ro ". ¿Qué dices tú ? ¿N o p ie nsas lo mi s mo ? ' 1' IWIl hecho mejores cond uc tores, e ntonces se ca iga n. Es-
~ L -S i . . 111 no s ucede ni e n la conducción de carros ni e n n in gú n
Soc. - Pe ro . s in emba r go, Pe ri cles los hizo más ir r i- 0110 ejercici o; ¿ piens as tú qu e si?
ta b les de lo q ue e ran c uan do los tomó po r s u c ue n ta, y CAL. - No , po r cierto.
es to cont ra él mismo, contra quie n menos hu biera Soc . - Lue go, según parece, e ran verdade ras nuest ras
deseado. I'H'n :de nt es razones de que no sa be mo s qu e ha ya ex is tt- Sl7a
CAL. -¿ Qu ie res q ue te d iga que estoy de ac uerdo? ,1" n ingú n bu en po lllico e n esta ci udad. Tú ya es taba s de
Soc. - S i, s i c re es que d igo ve rdad. lit ucrdo e n que no lo es nin guno de los ac tua les; pero no
CAL. - Pues de a cue rdo . pensa bas as l de los a n tiguos, y esc ogiste ést o s d e lo s que
Soc . - y s i los hizo más irrit a ble s. l no los hizo ta m o tu-rnos ha bl ado. Sin e m bargo, ha resu ltado que e ran se-
bién más injus tos y peores ? un-juntes a los act ua le s, de manera que si fu e ro n orado-
d. CA L. - De acue rdo tam bi én . t n no usa r on de la ver dad re tóri ca - pues no ha brfan
S OCo _ Por cons igu ien te . Pe ri c1es no era un bue n polí- I ¡, Ido- n i t a m poc o de la re tór ic a de a du lación .
t ico, seg ún es te razona mi e nt o. C AL. - Sin e m ba rgo, se es tá m uy lejos, Sócra te s, de
CAL. - No, e n t u o pinió n. tllll' a lguno de los de a ho ra llev e a cabo a lgo semeja nte a
SOC. - Por Zeus, t a m poco en la tuya , ateniéndon os a 1" que c ua lq uie ra de aqu éll os dejó hec ho. b
lo que has admit ido. Ahora h áh la me d e Cim ón 1"'; aq ue- Soco- Amigo Calicles, ta m poc o yo los ce nsuro en
llo s qu e te n ia a s u ca r go ¿ no le conde na ron al os t raci s- t unm c se rvi dores de la ciu dad; a l cont rario, creo que ha n
mo, a fin de no ot r su voz duran te di ez años ? ¿ No hicie- _Id" más d iligent es qu e los de ahora y más ca paces de p ro-
ron lo mism o con Temf st oc les y lo cast igaro n, ad em ás, con 1 II Tl1 r a la ci ud ad lo qu e ella desea ba ; pe ro e n c ua n to a
el des tierro ? ¿ No decidie ro n a r roja r a l báratro 'o, a Mil· modificar la s pas iones y repr im irla s tra tando de pers ua-
e c tades. el ve ncedor de Ma rató n, y no hu biera s ido a r roj a- di r 11 los ci ud adanos y de lle va rlo s con tra s u volu ntad a
do a él de no ha be rse opues to el pritan e? Sin e mbargo, aquello qu e pue da hacerlos mejores, e n nada supe ra n, po r
".1deci rlo, aquéllo s a és tos. y, s in e mb a rgo, es es ta la ún i- e
'H Ta l como h an llegado a nc sc rros lo s poemas hom é rico s, no ha y 1 11 mis ión de un buen ciudadano. Tambié n yo es toy de
ningú n pa saje e n e l qu e se e nc uen tre e ste pen samien to . Mu y se meja nte
es el e xp res ado e n Odisea IX 175.
acue rdo cont igo e n qu e aq ué llos han s ido más há b iles qu e
100 El o stracis mo d e Cimó n fu e e n el año 461. Tem ístoe le s se h alla - I Cl ~ de a ho ra para facilitar la con strucción de naves, mu -
ba en el ost raci smo c ua n do, a con sec ue nci a de l procesa cont ra Pa usa - tullas, arse nales y otras muchas cosas semeja nte s.
n ias, se vio envuelto injus ta men te en el delito de traición (TuáD., 1 135· 138), En todo ca so tú y yo est a mos hac ien do a lgo ri díc ulo
'o, El bdrlllro e ra un hondo barranco siluado fue ra de hu mura lla., t'n esta conve rsación . Dura nt e todo el tiempo que lle va-
do nd e se a rroja ba n los cad áve re s de los conde na dos a mue rt e. Pa rece
IIl OS hablando no cesamos de da r vu elt as a la m isma cues-
q ue Mild a des hubiera s u frido e . ta pe na s i n o se hu biera op ues lo el pre·
st dente de los prllanes. v éase n. en 4 73e. ll Ú ll , sin e nte r a rse ca da uno de Jo qu e el otr o dice. Por lo
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m e no s, yo creo q ue tú has ad m it ido y reco noci do r epe t í- ' 11111 so bre la coci na s ici lia na, y a Sa ram bo , e l t abe rner o,
das vece s M q ue ha y dos modo s de oc uparse tant o del ,111 le nde q ue és to s ha bla n sid o e xt rao r d ina r ia mente h á-
d c ue r po como del alma ; uno de ellos , de serv icio, por el cual I'lll' !'> e n el c u id ado de los c ue r pos, po rq ue el uno p ro ve ía
se pu ede n p rocu ra r ali mentos a l c ue r po s i t ie ne ham bre. ,l.· excelente s panes, el otro de guisos y el tercero de vino . e
be b ida s s i t ie ne se d y. si tie ne fr ío. ves t idos. m a nt a s, cal- Qu izá e nto nces te molestaras s i yo te dije ra: no e nrien-
zados y o tras co sas que el c uerpo nec es ita - in le nc io- ,1,' . na da, a m igo , a cerca de gim nas ia ; m e c itas ho m b res
na da me nte po ngo los mism os eje m plos para qu e com pren- h.lhi lcs e n se r vir y satis facer los deseos , pe ro q ue no s ao
das con más facilidad- o 1"'11 nad a no ble y bu e no a ce r ca de est a s cosas; ho m bres
Los q ue fa ci lita n es ta s cosas so n los vendedores. los 'IU l', si se da e l caso, lle nando y engorda ndo los cuer-pos
co merciantes o los a r te sanos q ue fabri can a lgu na de ellas: ,l., la ge nte y r eci b ie nd o las a laba nza s de ello s. term ina-
e pa naderos. cocinero s, tejedo res. zapateros y curtidores. 1 1\11 po r ha ce rl es pe rder incl u so s us an t igua s ca rnes. Los

No tiene nada de extraño que, a l encontrarse en es tas ccn- I...nudícados, a s u vez, po r igno r a nc ia. no ac usará n a los d
dl ctcne s. se c rean ellos mismos, )' los de más juzguen, que '11It' les preparaban los festines de se r responsables de sus
son e llos los qu e cu id a n del cuerpo, e xcep to quien sepa , nt c rm edades y de la pérdida de su carne original. Al con-
que, apa rte de to das estas arte s, existen la gimn asia y la 11 ario, cuando pasando el tie m po aquel hartazgo venga a
me dicina, que so n las que, en reali dad, c uidan del cuerpo 11 acrles la en fermedad, pu esto que se p rodujo sin tener
ya las q ue corres po nde d ir igir todas es tas arte s y urili- <'11 cuenta la higie ne, entonces culparán, vituperarán y aun

za r sus p roduc to s, po rqu e sa be n qu é a limentos o bebidas d.umr án, s i pueden, a los q ue , por casual idad, estén a su
so n buenos o ma los pa r a e l bu e n es tado del c uerpo, mie n- liOllu y les den a lgún consejo, pe ro alabará n a los prime-
SI8a tras que aquél las o tras 10 ignora n. Po r est a ra zó n decimos 1"", a lo s verdaderos c u lpables de su s ma les.
q ue toda s las o t ras a rtes so n servile s, suba lte rnas e inn o- Tú tam bién, Calicles, ha ces a ho ra algo m uy semeja n- e
bles res pec to a l cu idado del c uerpo , y que la gimnas ia y 11: . Elog ias a ho m bres q ue o bsequ ia r on ma gnlfica mc n te
la m edicina so n, e n j ustic ia . la s d ue ñas de e llas. ., los a te n ie nses co n todo lo qu e ésto s deseaban, y as l di-
Que lo m is mo ocurre res pecto al a lma. es cos a q ue e re¡ \ en qu e a q ué llos h icie ron grande a Ate nas , pero no se da n
ha bla s en tend ido c ua ndo yo lo dije y pres tas te t u asen tí. • lien ta de qu e, po r su cu lpa. la c iu dad es tá hinc ha da y ern-
m ien to co mo com p rend ie ndo lo q ue decí a; pe r o poco des- pUlIloñada. Pues , sin te ner e n c ue nt a la mode ra ci ón y la Sl9a
pués vie nes d ici en do q ue ha habido e n es ta c iudad exce. 11l !'> lid a, la ha n col mado de puertos, a r senal es. mu r all a s ,
b le ntes y precl a ros ci udada nos. y cu a ndo yo te p reg u nto 11' lIt'1S de tr ib u tos y o tras va c ieda des de este tipo. Pe ro
qu ién es ha n sido. p ro pones pe rso nas. a mi parecer, ta n • uando, co mo se ha dicho. venga la c risis de la e nfe r me -
adec uadas r es pec to a la po lít ica como s i, po r ejemplo , a l dad, cu lpa r án a los q ue ento nce s sean sus co nseje ros y elo-
p re gunta r te, ha blando de gimna sia, q uiénes han s ido o son gluran a Temí st ocles, a Cimón y a Pericles , qu e so n los ver-
há biles e n e l c uid a do de l c ue r po , citaras, comp letamente da deros c u lpa bles de sus m ale s. Ta l vez la emp re nderán
en se r io, a Tca r ión IU!, el pa na dero, a Miteco, el qu e ha es- .onngo, si no te precaves, y con m i amigo Alcíbíadcs. c ua n-
do pie rdan, además de 10 qu e ha n a dqu irido, lo que ya po-
10l v éa nse sous y S13d.
101 Tea rlón , pa nadero , debía de se r bas lan le co nocid o en Atenas , ~ " 1I0 . E l lu jo de la cocin a siracusa na era proverbi a l. Sara mbo es eo noci·
p ues to que aparec e en u n fra gmen to de Ari stófa nes. Míre co e ra sira cu. .1" , "'¡v por es la ci ta d el Gorgías.
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b seia n antes, aunque vosot ros no sois los a utores de es tos S ( lC, - ¿ No oyes ha blar así a los qu e afi rma n q ue e n-
da ños. s ino quizá só lo compfice s. cena n a los hom b res la vir tud?
S in e m ba rgo, veo que suc ede en es tos t iempos algo abo CAL. - Sí; pero ¿qué se puede dec ir de hom bre s qu e 520a
s u rdo y eso mi smo lo oigo referir en rel ación con la s gen- !lU va le n nada ?
tes del pa sado. Observo. e n efecto. que cuando la ciudad SÓe. - ¿ y qu é se puede deci r de los que asegura n q ue
p rocede contra a lguno de los políticos por creer qu e ha co- diri gen la ciud ad y que se p reocupan de hace rla lo mej or
met id o un a falta. és tos se irrita n y se lame nt a n de que se pos ib le y, po r o tra pa r te, c ua ndo llega la ocas ión, la acu-
les trat é indi gnamente. y di cen qu e, des pués de ha be r he- aun como a la más perve rsa ? ¿Crees que hay alguna d ife-
cho m ult it ud de be nefic ios a la ci udad. ésta in te nt a pero r encía e nt re és tos y aqué llos ? Sofi sta y orador, am igo,
derlo s inj us ta mente . Pero todo eso es fa lso; nad ie que go- ~o ll dos cosas igu a les o m uy ce rca nas y se meja ntes, co mo
e bíe m e un a ciuda d pu ede jamás perecer injustamente con - \0 decía an terior me nte a Polo ''''; pero tú, po r igno ra nci a , b
denado po r la mi sma ci uda d qu e gobie rna. Pa rece qu e con cr cc s q ue un a de ella s, la re tórica, es a lgo to tal ment e he r-
los que se jact a n de se r políticos sucede lo mismo que con l1lU SO, y desprecia s e n cam bio a la otra , Pe ro , e n verdad ,
los sofis ta s. En efe c to, los sofis tas, que son sabios en to- C'lo más be lla la sofística q ue la re tórica, en la mi sm a me-
do lo de más, come ten, sin emba rgo, este ab surdo. Aunque tlicla que el arte d e legis la r es más bello que el de adm i-
afirman que son maest ros de la vir tu d, con frecuencia acu- ntst ra r jus tic ia, y la gim nas ia más que la medicina . Yo cr eí
sa n a s us discí pulos de ob rar inju st a mente con ell os, por que única mente a los orado res polít icos y a los sofis tas
no pagarles s us remuneracione s ni dar ot ras prueb as de II Il les es ta ba permi ti do que jarse de qu e lo que e nseñ an
d ag radecimie nto a ca m bio de los beneficios recibid os. Sin l ' lo perjudicia l para ellos m ism os , o bien qu e s i se qu ejan ,
emba rgo, ¿qué pu ede haber más a bs urdo que es t as pala- ,,1mis mo ti empo, en esa misma qu eja, se ac us a n a si mls-
bras ? Unos hombres qu e han llegado a se r buenos y jus- IIII1 S de no haber hech o ningún benefi cio a las person a s
tos, a qu ienes su maest ro ha dejado limpios de inj u s ticia, 1\ las qu e aseg ura n ha bérselo he cho. ¿N o es as l ?
que t ie ne n dent ro de s i la ju sticia , ¿pod ría n causar daño CAL. - Sin duda. e
con lo q ue no t ienen ? ¿No te pa rece qu e esto es a bsurdo, SOC. - Y, por su pues to, sólo ellos pod rfa n, como es na-
a m igo ? Me has oblig ado a ha bla r como un ve rdadero o ra- rural, a n tici pa r un be neficio sin fija r recom pe nsa , s i fue-
dar popu lar, Ca licl es, po r no qu ere r responde rm e. I a ve rda d lo que asegu ran. Pues el que ha reci bido otra
C" L, - ¿No se rí a s ca pa z de ha b lar tú so lo, s i no se te rluse de beneficio, po r eje mplo, adq u irir ra pid ez e n la ca -
contes ta ? rr era po r lo s c uidados de u n maest ro de gim nas ia , q uizá
e Soc. - Es pro bab le; po r lo menos, es toy in te ntando pueda negar el reconocimiento a su maest ro si és te con-
a larga r mi s discu rsos, ya que t ú no quieres res ponderme. Ha e n el d iscí pulo y, después de h ab er con venido con é l
Pero, di me, amigo, po r el d ios de la am istad, ¿no te pare- 111m re trib ución, no cobra el d ine ro exactament e a l m is-
ce a bsurdo que algu ien diga que ha hecho bueno a un hom- 1II 0 tie m po qu e le procura e sa rapidez. En efec to, creo yo d
bre y q ue, a co ntinuación, se queje de que es u n malvado 'l llC los ho mb res no delinquen por lent itud, sino por in -
est e mism o hom bre a qu ien él afirma qu e ha hech o bue- [us tic¡a : ¿es a sí?
no y qu e es bueno ? CAL. - Sí.
C" L, - SI, me parece absurdo. 10.>4 Véa se 46Sc ,
[ 36 PlÁ LOGOS GORGIAS [ 37

SOc , - Po r consigu ien te, s i a lguien s uprime precisa. Soc . - No re pit as lo q ue ya ha s d icho muc ha s veces,
men te eso, la inju st ic ia . está sie mpre a sa lvo de se r agra- que el q ue qu iera me lle va r á a la m uerte, pa r a q ue ta m -
viado y sólo él pue de co n se gu r idad ant ici par est e bene fi- poco yo re pita qu e m a tará un ma lva do a un ho mbre bu e-
ci o. s i es q ue en ve rdad a lgu ien puede ha ce r mejores a lo s 110; ni ta m poco vuelvas a deci r qu e me priva r á de m is b ie-
ho mb re s; ¿ no es así ? nes , s i tengo a lg un o, pa ra que yo no di ga qu e, c uando me
CAL. - Sí. los ha ya a rre batado, no s a br á q ué hace r co n e llos , y qu e
SOC. - As í pu es, po r est a r a zón. se gú n pa rece, no es as f como m e los q ui ta injustamente, as! tamb ién, una ve z
vergonzoso cobra r din ero por dar consejos en las otras ma- en posesió n de ellos, lo s usará injustament e, es deci r, ig-
te ri a s . por ejem plo, e n la ed ific ació n o en la s demá s artes. nom iniosame n te y. por tanto, m ise r a ble m en te. e
e CA L . - Asl pa r ec e. CAL. - ¡Qué impre si ón me das, Sócrates , de tener una
Soc. - Pe ro e n esta cu estión de sa be r d e qué modo firme co nfia nza en q ue no te ha de s uce der nada de eso!
puede un o hacerse lo me jor posible y d ir igir perfectamen- ¡Como s i vivier as fu era de aquí y no cor rie ras el r iesgo
te su pro pia casa o la c iu dad. se juzga generalmente ver- Jc se r lleva do a j uic io por un hom bre quizá muy m al va do
gonzoso q ue a lguien se nieg ue a dar consejos si no recibe y despreciable!
dinero. ¿ Es cierto ? soc - Se ría yo ver daderamente u n insensato , Cal íctes.
CAL. - S i. , ¡ no c re yer a q ue en es ta ci udad a cualq u ie r a pu ede su ce-
SOC. - Y. evide ntemen te, la c a usa es que es ta cl ase de de r-le lo q ue sea. Sin e mb argo , estoy seg uro d e q ue, si com-
be ne fic io es la única que impuls a al que lo recibe a de - pa re zco an te un t ri buna l co n el r iesgo de se r condenado
sear d evolve rlo, de m anera que parece signo claro de e s- a a lgo de lo que tu di ce s, mi a cu sador será a lgún m a lvado d
te beneficio r eci bir re com pensa adec uada des pués de ha - - pues ni ngún hom bre honrado ac us aría a un inoce n te- ;
berlo hec ho, pe ro s i no la recibe es que no ha hecho e l be- incluso no se rí a na da inc reíble q ue se me co nde na r a a
ne fic io . ¿ Es esto asl ? mu erte. ¿Quie res que te diga po r q ué tengo es ta sos pecha ?
52 1a CAL. -Sí. CAL. - Desd e lue go,
Soc. - Expltcame, por ta nto, a q ué cl ase de s e rvi ci o Soc. - Creo q ue soy un o de los po cos a te nie nses, por
de la ciudad me in vitas. ¿ Es a l de lucha r con e nergía pa- 110 decir e l ún ico, q u e se ded ica a l verdadero afie de la
ra q ue los a te nie nses se a n mejores. co mo ha ce un m édi- polít ica y el ún ico que la prac tica en es tos ti empos ; pero
ca, o a l de se rvirlos y a d ularlos ? Dime la ver dad, Calicles; (UUlO, e n todo caso, lo qu e constanteme nte d igo no es pa-
jus to es , e n ef ec to, q ue te r m ine s la co nve rsa ción e xponien- ru a g r adar, si no q ue b usca el m a yo r bien y no e l m ayo r
do t us pen samientos co n la m isma fr a nque za con q ue em- placer. y co mo no q uie ro e mplear esa s ingenios ida des 100 e
pe zast e a ha b larme; dímel o con e xa c tit ud y valentía. tille tú m e acon sejas, no sab ré q ué decir an te u n tri bunal .
CAl. - Pu es bi en, te digo q ue se tra ta de se rv irlos. S l' m e ocurre lo mismo q ue le decía a Polo un, que se ré
b So c. - Lue go me in vitas, amigo, a se r un adu lador. juz gado com o lo se rí a, ante un trib u na l de niños, u n rn é-
CAl. - Un mi sio IUl, si prefie res la ex presión, Sócra- ¡[ka a quien acusara un cocinero. Pien sa, en efe ct o, de qu é
te s, porque si no o br as as í...
."" Sun las m ismas pa la bras que. to mad as d e Eurip idc s. d ir ijJió Cu·
10, No se co noce la ra zón po r la q ue este gen ti licio tie ne ese va lo r ¡¡l·ks a Sócrates en 486c.
peyurativ u, "" Véase 464d.
138 lll ÁLOG OS GO RGt AS 139

modo podría defende rse e l m édico pue sto en ta l sit uación, 1 ra los dioses ni co nt ra los hom bres. Hemos conve nido en
s i se le acusara co n est as pa labras: «Niños, es te ho m bre var ías ocasio nes qu e este m odo de defende rs e es e l m ás
os ha ca us ado muchos m ajes a vos otros; a los más peque- di caz. Si algu ien me de mostrara que soy inc a paz de pro-
522a ños de vosotros los destroza cor ta ndo y quemando S UlI l urarme est a clase de protec ción y de procur ár sel a a o tro,
m iem bros. y 05 hace sufrir e nf la quecié ndoos y sofoca n- lile a vergonzaría a l ve r probado m i e rror. ta nt o en prese n-
doos; os da la s be bidas m ás amargas y os obli ga a pasar da de m uchas person as como de pocas, como de esa sola
hambre y se d; no co mo yo, q ue 0 5 ha rt a ba con toda clase lllle me r ef u ta, y s i, por es ta in capaci dad, fu era condena -
de m anjare s agra dables. s ¿ Qué c rees que podr ta decir el dI) a m ue rt e, m e ir r ita ría ; pe ro s i per d ie ra la vid a por fal -
méd ico p uesto en ese pel igro? O bie n, s i d ijera la ve rdad: larme la retórica de a d u la ció n, estoy se gu ro de qu e me
• Yo ha ci a todo eso, niños. por vue s tra sa lud », ¿c uá nto verías sobre lle va r se rena m e nt e la m uerte . Po r qu e nadie e
c rees que prote starían ta les j ue ces ? ¿ No gr ita rían co n to- te rne la muerte e n s i m ism a, e xcep to e l q ue es to ta lmente
das sus fuer zas ? Ir racio nal y cobarde; lo q ue sí te me es co me te r inj us t icia.
C A L. - Ou izá; a l menos ha y que suponerlo. 1,',11 efec to, qu e e l a lma vaya al Ha des ca rgada de multitud
Soc. - ¿ No pien sa s que se encont ra rí a en un gran a pu- dI' de litos es e l más grave de todo s los m a les. En prueba
b ro so bre lo que deberí a deci r ? dl' q ue es to es así , si tú quieres, estoy d isp ue st o a re fer ir-
CAL. - Sin duda. 11' una na rración,
SOco- Pues yo sé que m e suce de rá a lgo semejante, si CAL - Pu es to que has termina do lo de más , acaba ta mo
co m pa r ezco an te u n t r ibunal. En efec to, no podré cita r btén eso .
p la ceres que les ha ya proporci o nado, p lace res que e llos Soc. _ Es c uc ha , pues, co mo dicen , un pre cioso r e la to 5230
cons ide ran be ne ficios y se rv icios úti les ; pero yo no e nvi- rjuc t ú, se gún opi no , cons ide rarás un m ito , pe ro q ue yo
d io n i a los q ue los proc u ran ni a los que los di s fr ut an . creo un re lato ve rdadero, pues 10 q ue voy a conta r te lo d i-
S i a lgu ien m e ac usara de corrom per a los jóvenes porq ue KtJ convenci do de qu e es ve rdad. Como di ce Homero "" ,
les ha go dudar. o de censu rar a los mayore s con pal a bras zcu s. Pos idón y Plu tón se reparti eron el gob ie rno c ua ndo
ásperas en privado o e n público. ni podré decir la verdad : lo recib ie r on de su padr e. Existia e n tiempos de Cro no,
e • Todo lo que digo es jus to y o b ro en benefic io vues tro, o h y aun a ho ra contin úa entr e los dioses. una ley a ce r ca de b
jueces », n i ninguna o tra justi ficación, de manera q ue pro- los hom b r es segú n la cual el qu e ha pa sado la vida jus ta
ba blemente su fr iré lo q ue me tra iga la suerte . )' piadosamente de be ir, después de mue r to. a las Isl as de
CAL. - ¿ y te pare ce bie n, Sócrate s, qu e un ho m b re se los Bie nave ntu rados y resi d ir a llí e n la ma yor feli c ida d ,
e nc ue nt re e n es a s ituació n e n s u ciudad y qu e no sea ca- libre de todo m a l; pero e l qu e ha s ido inj us to e im pío de-
pa z de defe nderse ? hc ir a la cá rcel de la e xp iación y del castigo. qu e lla m a n
Soc . - Si. Callclcs. co n ta l de qu e tenga aq uel so lo me. Tá rta ro . En ti e mpos de Crono y a u n m ás re ci entemen te,
d io de def e nsa que tú has r econocido repetidas veces ''''', ya e n e l reinado de zeus. los jueces es ta ba n vivo s y juzga-
a sa be r, qu e se haya proc u r a do a s í m ismo la pr o tec ció n ba n a los ho mbres vivos en el dí a e n que iban a morir; po r
d qu e co ns is te en no ha ber dicho ni hec ho nada injusto con. tanto, lo s j u ici os era n defe ct uo sos . En co nsecuenc ia. Plu -
''''' Véa se 11. XV, 187. Respe cto a la id ea d e Platón 50b l e la vid a ul·
' 01 So lame nte u na vel en 50ge . ¡ .. uc rr cna: AIIO/, 4{k ; Fedó 'l I0 7d, y Rep. 614b .
140 DIÁLOGOS
GORG IAS 141

Ión y los g ua rd ia nes de la s Isl as de los Biena ve nt ur ado. PIIl' S de q ue los ho mbres ha ya n m ue rt o. ce lebra r á n los j ul.
~e presentaron a Ze us y le d ijeron qu e, con frecue ncia , I i l) .~ en la prader a en la e ncrucijada de la que parten los
iba n a uno y otro luga r hombre s que no lo m er ecí an . Zeua dll ~ ca mi nos q ue con ducen e l uno a las I slas de los Bten u-
d ijo:
vcut urudos y el o t ro al Tá rta r o. A los de As ia les juzga rá
e . Y? haré q ue esto deje de suc e der. En efec to, a hora nadamanus. a los de Eu ro pa, Éaco; a Min os le daré la mi -
se d~cl d en m a l lo s ju icio s; se juzga a los hom bres -dijo- _11011 de pronunciar la se ntencia de fini tiva cua ndo los o tr os
ves tidos. pu es se los ju zga en vida. Así pues , d ijo él, mu - I t u ~ te ngan d u da. a fi n de que sea lo m á s ju sto posib le e l
c hos q ue tie nen el a lma pe r versa es tán re c ubie r tos co n juici o sob re el c a m ino que ha n de se gu ir los ho mbre s. s
c ue r pos. h ~~mo sos . con nobleza y con r iq uezas. y c ua ndo
llega el J UI CIO se presentan numerosos testigos pa ra ase- Es to es , Ca lic les, lo q ue he oi do decir. y te ngo co nf ía n-
g u ra r q ue ha n vivido just a m ente; los jueces q ue dan tu r- 111 en q ue es ve rdad. Pienso qu e de este r ela to se saca la b
d b,ndos po r t ~do es to y, además, ta m bi én e llos juzgan ves. _I¡(uie nte co nc lus ió n. La muerte, seg ún yo c r eo. no es m ás
t ldos: s us OJO S, sus oídos y todo el c ue r po so n co mo un ' IUt ' la se pa ració n de dos cosas. e l a lma y el c ue r po , Cua n-
ve lo con q ue c ub re n por dela nte s u a lma. És to s son los do se han sepa ra do la una de la o t ra, c onse rva cada una
o bstácu los, qu e se le s interponen y. también , sus ropas y 111' ellas, en ci erto m odo. el mi smo estado qu e c ua ndo el

la s de ~os Juzgados; así pues. en primer luga r. dijo, hay homb re es taba en vida. El cuerpo conserva su na turaleza
q ue qu itar a los hom bres el conocim iento a ntic ipado de v deja visi b les todos los c uida dos y e nfermedades. Po r e
la hora de la mue r te, porq ue a ho ra lo tien en. Po r lo ta n. I'jt'm pio, s i c ua ndo uno vivía tenia un c uerpo g rande por
too ~a ~ e ha o r de na do a Pr ometeo q ue les prive de est e ca. unt uraleza o por la a limen tación o po r a mbas co sas, des-
e noc rrrue nto. Adem ás, hay que juzga rl os desnudos de to o pués de mue rto su ca dáve r es g r a nde; si e ra robust o.
da s estas cosas. En efecto, deben se r juzgados des pués de uunb ién lo es después de m ue r to, y asl suce siva me nte. Si
la m uerte. Tambié n es preciso q ue e l juez est é desnudo »costu m b raba a lle var la r go el cabe llo . su c ue rpo ti en e
y q ue haya m uerto; que e xa m ine sola m e nte co n su a lma rumbi én la r ga cabelle ra , Si e ra un co nt inuo me recedor de
e l a lm a de cada un o inmediatamente después d e la muer. azo te s y, c ua ndo v ívta, tenia las se ña les de los golpes, las
te. cuando est á a is lado de todos s us pa ri e n tes y c ua ndo cica tr ices del lá t igo o de o t ras heri da s, tam bién de spués
~a, ~ejado ,e n la tierra todo su o rnamento. a fin de q ue el de muerto so n ma nifie stas esta s se ñal es. S i a lguno e n vi-
JUICIO se a Ju st o, Yo ya había advertido es to a ntes q ue vo- Ila tenía los mie m br os rotos O def ormados, tambié n u na
sotros y nombré jue ces a hijos mi os, do s de Asia . Mi. VI' Z mu e r to qu edan visib les estos m ismos defec tos , En u na d

524a no s Il U y Ra da m a ntis, y uno de Europa: Beco. Es tos, des. pa labra, la d isposi ción ad qu irida po r el cuerpo en vida
perma ne ce man ifie sta después de la m ue r te e n todo o e n
lIu Rad am an us, h ijo de Zeu s y de Eu ro pa No mu r ió, sino q ue Iue pa rt e dura nte ci e rto tiempo ,
a l ~l lse'O do.nde es le(d s la d or r j uez ¡PI"'n.• 0 1. 11 75. 1'11. II 73). Pta t én Me parec e qu e est o mi sm o suce de respecto a l alma. Ca·
lo ene lamb":~n en Ap'OI. 4 1a. Minos es el famo so re)' d e Cret a pero aqul
a pa rece e n s u mis ion de j u...z de los muerto s en el Ha des ju nt~ co n Rada- lid es ; c ua nd o pierde la envoltu ra de l cuerpo. son vi s ibl es
manus.. En Ap'OL 4 1 a pa rece en es ta m isma fu nción , además. con Eaco i-n e lla todas las se ña les. ta nto la s de su natura leza co mo
y TrJpt~Jc: mo. Éaco es hijo de Zc:us y de Egjua, c uyo no mbre tom ó la co- las impr esio nes q ue e l hom bre grabó en e lla por su co n-
noctda Isla . Fue fa mo so por su piedad. O c sp u~ s d e su mue rte fue juez ducta e n cada situa ció n, Así pu es, cua ndo lle ga n a presen-
de Jos mue rt o s. .
d a del juez. los de Asia . por ejem plo. a nt e Radam ant ¡s , I!
142 DIÁLOGOS GORG IAS 143

é s te les hace de te ne rse y e xamina e l a lma d e cada uno s in 111 m más g ra ves e im píos. Confirma esto Hom e ro, pu es
sa ber de q u ién es , s ino qu e, c o n fr ec uen ci a , tom an do al ,.,n reyes y prí nci pes los q ue é l ha r e prese nt ado co mo co n- e
re y de Pers ia o a otro rey o príncipe c ua lqu ie ra, o bse rva .h-uados e n el Hades eca st ígo s s in fin , Tántal o 1" , Sís ifo
q ue no hay e n s u al ma nada s a no, s ino q ue la ve c r uza da , rici o. En ca m bio , a Te r s ite s 111 o a cualq uier o t ro ma l-
de azotes y lle na de cica tr ices po r efecto de los pe rju ri os "mili de vida privada nadie lo ha re pre sentado s ujeto a los
SlSa y la inj us tici a , se ña les q ue ca da una de sus accione s dejó ma s g ra ves cast igos co mo in c u ra ble , porq ue, e n m i o p i-
im p re sa s e n e l a lma. y ve que e n e lla todo e stá torcido por uión. no le e ra posi b le ha ce r m al y, por e llo , ha sido m á s
la men tira y la va nida d y nada es re cto, po rq ue ha viv ido 1I1u rt una do que aquello s a los qu e les e ra posible hace r lo.
lejos de la verdad . Ob serva t ambié n que e l poder, la mo lí- I lJ efecto. Ca licles , los hom b re s q ue llegan a ser má s pe ro
c ie, la insolen ci a y la in tem perancia de sus actos ha n IIc- \ 1" !'tus sa len de e ntre lo s po deroso s ; sin em bargo, nada im- 526a

n a do e l alma de deso rden y de infam ia; al ver este a lma. pllll' qu e e n tre ellos se produzcan t a mbié n hombres bue -
la -envía d irecta me nt e con ignom inia a la prisión e n la que nn ~ , y los q ue 10 son m erece n la mayo r a d m iración , Cie r-
debe su fr ir los cas tigos adec ua dos. nuncnte es muy di fíc il y digno de g ran a labanza m an te-
nerse justo toda la vid a, cua ndo se tie ne p lena liberta d de
b Es propio de todo el que su fr e un casti go, si se le cas- " ' 1 injusto. Est os hombres so n po cos, aunq ue , en e fec to.
tiga justamente. hacerse mejor, y así sacar pro vecho, o se r- «uu¡ y e n o t r as partes, han ex is tido en e l pasa do y creo
vir a los demás de ejem plo para q ue, a l verle ot ros sufri r que e xis tirá n en e l futuro ho mbr es bu enos y honrad os r es-
e l cas t igo, tenga n mie do y se m ejo r en . Los q ue sa ca n pro- pecio a esa vir tud de adm in ist r ar jus ta mente lo qu e se le s b
vec ho de su fri r un ca st igo impuesto por los dioses o po r '1JIlIIa. Uno muy famoso, a un e n t re los demás gr iegos, ha
los ho m b re s so n lo s qu e ha n come tido del itos que a dmi. , 1110 An sudes. hijo de l isimaoo; pero, a m igo, la m ayo r par-
te n c u ra ció n ; a pe sar de e llo , este provec ho no lo alean. 11' de los homb re s poderosos se ha ce n m a lo s.
zan más que po r medio de s ufr im ie ntos y dolo r es , aqul Co mo iba d ici en do, cuando Radamant is to m a a uno de
yen e l Ha des , porque de o tro m odo no es posib le cu ra r se I' MIS homb res , no sabe absol utame nte nada acerca de é l.
e de la injus t ici a , l os q ue han co me lido los m ás g raves de- 111q u ién es ni q u ié nes so n sus padres, pe ro 51 s abe q ue es
lit a s y, a caus a de e llos , se ha n hec ho ya in c urables son 1111 mal vado, y, a l ve r esto, lo e nvía a l Tártaro co n la ind io
los qu e s ir ve n de ej e mplo a los demás; e llos m ism os ya t ució n de s i le juzga cura ble o inc u r a b le; llega do allí, su-
no saca n n ingu na ventaja, pu es to q ue so n in curables , pe - I I l ' los cast igos adecua dos . Alguna vez, a l ver un a lma que e
ro sí la sac a n los q ue les ven padecer para s iempre los ma- h ¡1 vivido piadosamen te y sin sa lirse de la verdad, a lma
yores}' m ás dolo ros os s uplicios a causa de sus cu lpa s, col-
gados , po r as! decirlo, co mo ejemplo, a llí en la prisión de l III lic io, T án talo y Sis ifo so n, en el mun do gr iego, los tr es ejemplos
Ha des , donde so n espec tá culo y adver te ncia para los cu l- , lh l' OS d e co nde na dos a cas tigos e ternos, segú n los vio Ulises (Od. XI
d pa bles q ue, sucesiv amente, va n llegando. Yo d igo que Ar· ~7 1'11S . ), Al primero le dc~o raban e l hígado dos b uit res; el segu lldo mod a
.l., s.-d e n med io de l a gua y no podía alcanzar los fru tos qu e pe ndía n so-
qu e lao lle ga rá a se r uno de éstos, si es ve r dad lo qu e dice 101 <' tol , Y S lsifo em puja ba co n tin ua me nte ha cia a r riba un a gra n pied ra
Polo, y cualq uier otro que sea un tirano de es ta clase. Creo 'l Ile" ~ ol ~ la s iempre a rodar hacia abajo.
que el m a yo r n úm e ro de los q ue s ir ven de ejemp lo sa le 111 Ter sltes , person aje homérico {l/. Il 212), eje mp lo tradi cio na l de

de los ti ranos, r eyes, príncipes y de los q ue gob iernan las l., u 'p res e n ta ción de ca tego ría socia l infe rior e ntre lo s héroe s y los nu -
hl.·•. Era n prov erbiales su fealdad y su len gua proca z..
ci udades, pu es és to s, a ca usa de su poder. cometen los de-
144 DIÁLOGOS GOR GIAS 145

de u n pa r t icul a r o de otro c u alquiera , pero, espccia lme n , lóu ta n la r ga , rec hazad a s las de más opin iones, se man-
le , es toy segu ro de e llo . Ca lid e s , de un fil ó so fo q ue se hn t h-uc so la e sta idea, a sa be r, que es necesario preca verse
ded ica do a su ocupación, s in inmi sc uirs e e n negoc ios aje 111¡'¡ S de come te r inj ust ici a que de s uf ri rla y q ue sc dc be

nos m ien tras vivió , se ad mira y la e nvía a las Is las de 1m , utda r. sob re todo, no de pa rece r bue no , s ino de serlo, e n
Bie nave nturad os. Es to mism o hace tambié n Éaco: ca da 11IÜ'ad o y en pú blico . Qu e s i alguno se hace ma lo e n a lgu-
uno de ello s j uzga te nie ndo en la ma no una vara; Mi n() ~ 1111 cesa, debe se r ca s tiga do , y éste es el segundo b ie n des-
está se ntado observa ndo; sólo é l lle va ce t ro de oro, co mo ptll'S del de ser ju s to, el de volve r a se rlo y sa t isfac e r la
d en Home ro ti'
d ice Ulises que le vio I ulpa por medi o de l cast igo. Que es preciso huir de toda e

udu lación, la de un o mismo y la de los demás. sean m uo


llevando u n ce tro de o ro, administrando just icia a 101
I !los o pocos, y que se debe u sar s ie m pre de la retó rica
(m u er l oJ,
Vde tod a o tra acción e n fa vor de la justicia. Así pues, haz-
IUl' caso y acom pá ña me allí, donde. una vez que ha ya s lle-
En tod o caso, Ca licle s, es to y convencido de estos reta-
tos y medito de qu é modo p rese nta ré al juez mi alma lo gudo, e ncon tra rás la feli cidad e n vida y en muerte, según
más sana po sibl e. Desprec ia nd o. pues, los hono res de lB "Ilscña es te rela to. Permite que alguien te desprecie co-
111 0 insensato, qu e te in sult e, si q uiere y, por Zeus , deja.
m u ltit ud y cult ivando la verd ad . intentaré se r lo mej or
que pued a. m ien tras viva, y a l morir c ua ndo lleg ue ID . in pe rder lú la calma, que te dé es e ignom in ioso golpe,
~ muerte. E invi to a tod os los demás hombres, en la medio
pue s no h abrás su fr ido nad a grave, s i en verdad e re s un d
d a e n que puedo, y po r cie r to ta m bién a ti, Calicles, CQ. hum b re b ue no y honrado que prac tica la vir tud,
r respondiendo a tu invitació n, a es ta vida y a es te debate Despu és, c ua nd o no s ha ya mos eje rci tado as í en com ún,
qu e va le por todos los de la tie r ra, según yo a fir mo , y te en to nces ya, s i no s parece que de be mos hacerlo, no s a pli-
I aremos a los as un tos púb licos o delibe ra remos qu é o tra
censuro por que no se rás ca pa z de defe nde r te c ua ndo llc-
gue e l juicio y el e xame n de q ue a hora ha bla ba ; más bien, lusa nos parece conve n iente , pues to qu e sere mos má s ca-
pU l ' C S de deli be ra r q ue ahora . En efecto, es vergo nzoso
527a cua ndo llegues a nte ese j uez, el hijo de Egina, y te tome
y te po nga ante s i, te queda rás boqu ia b ie rt o y a turdido, ' IUl', es ta nd o como es evide nte que es ta mo s a l prese nt e,
no me nos t ú a llí q ue yo aquí, y qu izá a lgu ien te a bo fe te a- pres uma mos de se r a lgo. nosot r os que ca m bia mos a cada
rá ind igna me nte y te u lt rajará de mil mod os. momen to de o pinió n sobre las mi sm a s cuest iones, y pre-
, isa men te so b re la s más im porta nt es. A ta l grado de ig· e
Quizá es to te pa rece un m ito, a m odo de cuen lo de vie- numnc ¡a he mos llegado, Por consiguiente , to me mo s ca-
ja , y lo de sp reci as; por cie rto, no se ría nada ex t ra ño que 11 10 gula este re la to que ahora nos ha que dado rna mfies-
lo desp re ciáramos, s i inv estigando pudié ra mos ha llar al- lo, que nos indi ca q ue el mejor gen ero de vida cons is te
go mejor y más verdadero, Pe ro ya ves que, au nque es táis " 11 vivir y mor ir p rac t icando la jus t icia y todas las de má s

aquí vosotros t res, los más s ab ios de los gr iegos de a ho- vlrtudes. Sigámoslo, pues, nosotros e invit em os a los de-
b ra: tú, Po lo y Gorgias, no po déis demost rar qu e se deba III <'1 S a segu irl o tam bié n, a ba ndo na nd o ese ot ro en el qu e
lleva r un modo de vida dis tinto a és te qu e resulta también 11'1 co nfías y al que me e xhor ta s, po rqu e en ver dad no vale
útil después de la muerte, Al cont ra ri o, en un a co nve rse- liada, Callcles.
113 v éase o d. X I 569.
M _ 11)
MENÉXENO
INTROD UCCIÚ N

El Menéxeno es un e pitafio o d isc u rso fú ne bre conve n-


, n.nn l, enma rcado e n dos partes dialog adas que sir ven de
1'1 ca m bu te y epílogo. El in terloc uto r de Sócrates es, en
n tl' ca so, el joven Men éxen o. pe r tenecie nt e a un a fam ilia
,1,· cierta raigambre en la vid a púb lica , qu e ha llegado a
111 edad de la efebía y es tá en po sesión de los derechos que
,lI l1fie re la legis lación a te niense. Menéxeno , que se mu es-
t i ¡¡ IlIUY inte resado po r la oratoria , informa a Sócrates so-
1111' la ele cción del orado r enc argado de pronu nciar la ora-
, Iún fún eb re a n ua l. Sóc ra t es, e n un tono irónico y a rro-
U¡l ll le, y en un contexto que d es virtúa a lgu nas de s us afi r-
maclones habituales, desmi tifica a nte el joven las tarea s
,1,- los o radores e ins ist e, sob re tod o , e n la facilidad con
q lle elabo ra n este tipo de d iscu rsos ' . E l mism o se o fre-
" . iI pronu nci ar uno m uy concre to: el q ue ha a prend ido
,1,' Aspasia , la fa mosa he tera jonia , com pa ñera de Peric lcs,
. mn pues to a base de la so ld adu ra de pa rt es im pro visadas
v res tos de un a nterio r di scurso que había esc r ito para
uqué ]. A continuació n, Sóc rates comie nza s u pe ro ración
pO I el elogio d e los m ue rtos e n el com ba te, conti nú a con
111 rel ación de los acon teci mientos hi st óri cos más dcs ta-
rndus hasta la p az de Antálc idas, y fin ali za con la pre so-

I I'a r a el pe rsonaj e de Sóc ra te s en el ámb ito del Menéu no, v ~u e R.


1 I AVAUIJ, Le . Ménrú ne. de Ptato n el la rh éto riqu e de son ternps, P a rís ,
1'J/lO, págs . 110 Y s lgs .
150 DI,\LOGOS M E NÉX EN O 15 1

po peya de los m ue r tos - q ue e xho rt an a s us desce ndie n- 1I iper'ides (VI), En todos ellos e nco ntr a mos el es q uema ca -
tes a tene r lo s pr ese ntes e im ila rlos- y con una consola- mc tert st ico: e n prime r lugar, el e nc o mi o de los hé roes
ción a los pa d res. e n que se recuerda n los desvelos del Es- mue r to s o desa pa recidos e n el co m ba te; en seg undo lu-
la do para con e llo s y pa r a co n los huérfa no s de los ¡tllr, la co nso lació n a los vivos, padres y huérfa nos de a qué-
desaparec idos. llos. A su vez, 'e n la co m posic ión de la pri mera parte apa-
De todas las ob ra s de Plató n, el Menéx e no es, en rela - recen los tema s us ua les de la a utoctonía de l pa ts. el e lo-
ció n con s u b rev edad, la q ue má s co nt ro ve rsias ha s usc t- ¡tio de la no b le za de c ri anza y e d ucaci ó n, e l catá logo de
tado. La va sus tma exégesis c rí tica desencadena da desde lus leye ndas. et c . A es to seguía la relación de ha za ñas, tan-
el s iglo x rx.que e n ocasione s ha con tri buido a ac rece nta r lu e n tierra como en el m ar, comenza ndo s ie m p re po r la
s u carácter en igmático. da buena prueba de elJo. La ra- fl's ta de la s Gue rras Médicas.
zón pa ra tan tas dificulta des en la interpre ta ci ó n es que En c ua nto a la segunda parte , la consolación a lo s pa-
resu lta d ific il hallar, en u na obrita tan corta, m a yor nu- tire s y e l tema de la solicitud del Es tado por los hu érfa -
mero de errores -por no decir fa lse dades-, an acr on is- IUI S, son igualmen te tópicos cons tantes ,
mos )' e xage raciones. Todo ello. por ot ra parte . sustenta- Adem ás de la identidad temática , desta can también los
do en una ir onla convenie nte m ent e m a t iza da y en una paralelis mos en los aspectos es tilísticos, aunque Pla tón
co nstante a m bigüeda d. Por lo dem ás. no fa lta n ta m poc o llit lle vado a lo s últimos ex tremos e l tr ata m ie nto de la s
a lo la r go de l di sc urso las s uge re nci as de ti po moral y las ug u r as de retórica y de pensamiento ". Po r eso, est á fue-
disq uis ic iones po lític as. En c ua nto a los planteamientos 1 a de toda duda q ue . en este aspecto de la c uest ión , la vin-
fil osófico s q ue cab r ía es pe r a r, so n m ás b ien m arginales, rulac lo n del Me néxeno co n el d iscurso f únebre de Oorgtes.
escasos y se e nc ue nt ra n supeditados a la pa rticular s igo mod e lo p rfm ert simo para la e la bo ración de la prosa a ro
nifica ción del á m b ito de l d iscurso . u s uca . es obliga da. En e l texto de Go rgia s (Fr. B 5 A, D.
El Menixe no continúa la a ntigua tradici ón de l K, - Cf. A 1, O.K.), a pesar de la b reve dad de l fragme nto
epitafio J. Cie r to es que hay en el tratam ie nto pla tó n ico ' IU l ' co nservamos , se encue nt r an ya recogida s la ma yor
a lguna s inno va cio nes J. pero, e n general. e l pa r en tesco parte de la s figura s u ti lizadas po r Pla tón .
co n la co ncepció n an terio r del gé ne ro es m uy not a b le. S u Ta m poco son excl us ivas de l Menéx eno las fa lse da des
est r uc tu r a es la habitua l e n lo s d isc ursos fú nebres co n. v exa ge r aci o nes. Precisame nt e, Sócra tes se refiere en el
se rva dos, de sde e l de Pericles (TuCID1DES. II 35 ss .), has ta pr ólogo, con s ut il ironía . a la ex t r aordina ria ha bilid a d de
el a tr ib uto a Demóst enes (LX ), pasando por el q u izás lus o rado re s para. po r así decirlo, apañar e l d iscu r so y he-
auténtico de Lisias (ll) y el. con toda ce rteza, genu in o de cluza r con sus pal a br a s a l a uditorio; la p rá c t ica consist la
rn a provec ha r, a nte todo, los datos q ue aport a ba la tr a di -
l Sobre la fo rmllc ió n y desar rolle de la s o racion es fú ne bre s, d . W. ción y e n e la bo rar co n e llo s un encomio genera l, e n e l qu e
KIHOOH • • Erlebnls u ml Da rst e llun g d e r Pen e rk riege » , Hypu",,, ema· las defor m acio ne s de lo re al -ocult a m iento de lo a d ver-
la 16 (1966), Pa ra la inco rp or a ción d e l disc urso fú nebre a la s ce re mo nias su y neg a t ivo, e xalt ac ión de lo favo r able y glorioso- co n-
de la s epildphia , d . ¡bid., pá g. 95. formasen el to no solemne y pa t ri ó ti co del di scurso ,
J La má s impo rtan te d e la s c u a les es , s in duda. la proso pop eya de
lu s mue rt o s. fig ura ret ó r ica ause nt e d e los de más epi ta fios. el. e ~AVAU n. 4 eL pa ra el in vent a rio y a nálisis de e sta s fig u ra~ , e ~A V A1JD, ibid.,
Le . Mé ned tll!>.... p ágs, 221·223; 203 Y s tgs. pltgs. 229·24 4.
152 DIALOGO S MEN ÉXENO 153

Más di fici l re su lta de te r mi na r qué mo t ivos impu lsa- un-os e pita fio s. Parece claro qu e el di scurso qu e se guirá
ron a Pla tón a esc r ibi r es te e pita fio y con qué finalidad. . c'llo puede e nte nde rse como una brilla nte ilu s tració n de
De te r mi na r, e n s uma, el se nt ido del di scurso . 1" parod ia q ue p re viamente se ha desarroll ad o en el pró-
El conte nido del pró logo es, a es te respecto, s umamen- 1,,~t1 . Y, e n realidad , s u es tructu rac ión obedece a es ta p re-
te ilu s trado r. Ya la pr ime ra refe re ncia a la te mporalidad misa. pu es además de las d istorsion es de la ve rda d y del
del q ue hace r filo sófi co y de la paideia es tá pla nteada en tuno de e ngañ osa exaltación en qu e se e nc uad ra e l elogio,
func i ón de la i ronía. Sabemos. con certeza, qu e tanto Pla. eluso de la s figuras de est ilo y de pensamie nto sigue n tamo
tó n como Sóc ra tes proponían u na ac t ividad filosófica du- hil'n el esquema conve nc ional propio de las es cu elas de
rade ra en cont ra del pe nsamiento so fis ta. qu e h ad a de la l j l retór ica.

filo sofi a un a mera e ta pa del sa be r, inferior en sus co me- Mas si no cabe duda de qu e el é nfas is es tá pu est o e n
t idos a la pra xis política . Por t a nto, la opini ón aquí reco- lu iro n ía, ta m poco puede pasa rse por alto el patetismo y
gida no deja du da acerca de s u ca rác te r a ne cdóti co (Me- lu graveda d de la segu nda par te de l disc urso. Pla tón no
n éx. 234a ). Tampoc o ofr ece duda el carác ter p aródico de renuncia aquí a los procedimientos def orman tes de los
la desc ripci ón de la s oraciones f únebres que hace Sócra- unidores, pe ro int roduce pla nt eami entos y suge rencias de
tes: ell a s desdeñan la verdad ; eje rcen co mo una esp ecie curácter moral qu e hacen pen sar en que muy bien pudo
de enc anta m ien to sobre el a uditorio, ya predispuesto, a vers e ind inado a ado pta r, al ma rge n de la parodia , una
ba se de rec u rso s de o ra to r ia; encomia n no sólo a los m ue r- nd itud com pro me t ida. E staríamo s en tonces. au nqu e no
to s, s ino ta m bi én a los an tepasa dos, al Estado e, incl us o, pa rece probab le, a n te una dualid ad de c r it e r ios pa ra la
a lo s vivos; e n fin, bu en a pa r te de esos d isc urso s est án ya elaboraci ón de la obrita. En c ualq uie r ca so, so n éstos los
elabo rado s de a nte mano (234c. s s.j. También es preciso in- ext re mos sobre los que gra vita la critica del Men éxeno que
te r p re taren el m ismo se nt ido las refe renci as a Aspa sia , o M ' pregu nta s i, en defi n it iva, se t rata de u na obra se r ia o
mejo r a su mé todo de «soldadu ra » para cons t r u ir d isc ur- dc una o bra paródica; s i el acen to es tá pue sto en la iro nía
sos. y a Co nno , un mú s ico med iocre. o bje to, a me n udo, 11 e n las re fle xiones que se de d uce n de la segu nda pa r te

dc las bu rl as de los có micos. Re sulta d ifícil . en efec to, lid di scu rso; s i a m bos t ra ta mien tos. e n fin , t ienen acomo-
c reer qu e Pla tón podía po ne r e n si tuación de infer ioridad , do a lo la rgo de la oración fÍm ebre propiame nt e d ich a .
como se deduce de l te xto, a l orador Antifonte y al mú sico La s me nciones del Menéxeno en la antig üedad no son
La m pro, a m bo s de e xcel e n te reputación, e n relación con IJIUYa bunda ntes. Son esc asos ta m bién los da tos qu e a por-
los otros do s perso najes. Pe ro, además, Sócrates no escon- l a es la c r it ica, sobre todo. for mal : el M en éxen o apa rece
de sus propós itos ace rca del disc urso que se dispo ne a pro- va lorado e n rel aci ón con otras ob ra s s imilares , s ie m pre
nu nci a r: Menéxe no ha re pli cado a sus p rimeras pa labras en fu nción del ar te de la re tórica, y no se le ana liza e n su
con un reproch e a su s incesantes bu rlas de los oradores. con j un to. como un todo homogéneo, sino separadame n-
A est o re sponde Sócrates que él m ismo podría pronunciar 11.' , e nju ici a ndo la s partes en su op in ión más d est acad as
una oración fú ne b re «sin em plea r nad a de su pr op ia co- y prescindie ndo del diá logo, don de casualmente reside la
sec ha ». Da a ente nde r, de este mo do , que no está en su clave de la ir-oní a. De todas formas, Dion isio de Halíca r-
ánimo pronunciar un discu rso mo de lo, un epitafi o que co- nas o, aun sin ver e n ello un deliber ad o prop ósito de Pla-
rrija los defe ctos o modifique los mat ices descuidados por ron. ha es t imado como anómalos y carentes de senti do a l-
154 DIÁLOGO S M EN EX ENO 1SS

gunos pl ante amientos de la pr ime ra parte del d iscu rso (De- de lo real se r ia n ta n sólo pin cel ada s an ecdót icas aj e nas
m ó tenes 24.27 ). lo q ue no es poco, si, como par ece , e l M e- ¡ l su a u tént ica s ignificación 1.

n éxeno es una co mposic ión pa ródica . Por el co nt r a r io. plu- Un se gundo gru po trat a, a nte todo, de conci lia r lo que
tarco c onside ra s u perfici a l y burlesco el pró logo, per o no dc se r io e ir ónico se nos a parece e n el te xto. De acue rdo
a s í el di scur so (Vida de Pericles 24, 7). En este a náli sis es- con la opinión más gene ral de est os est ud iosos, Plat ón ha-
q uem á tico abundan o tros a u to res, ya de la antigüedad taro br ta q uerido, e n un p r inci pio, com pe ti r con la s escue la s
d la , co mo Cle mente de Aleja ndrla (Pedagogo 1I 69, 3) y. pa r- eleo ra tor ia, e nto nces t an e n bo ga , y de mo st ra r su capaci-
t icu la rme nte. Bstobecpt, 1, 86; 3, 38, 49; 3, 9, 28; 4, 39, 24; dad e n la ela boración del género, pero, a l mismo t ie m po ,
etc.), q ue se lim ita n a de tra e r , de a lg una s partes de la pro- habría introducido o t ras c uest iones é tico- fiIo sóf icas y po-
sopo pey a, ciertas s uge rencias de t ipo moral ' . liti cas, que o bligan a analizar ci e r tas pa r tes del d iscurso
En c uanto a la crítica moderna. la s so luciones pro pues- ,,1 ma rgen de los lím ites de lo pa ród ico . Algun os, como
tas so n muy d ive r sas. El pun to de pa r tida m ás no tab le s i- Pohlenz, Friedlae nde r, Kennedy ' , pre tenden, de est e roo-
gue s iendo la e xce lente di sertación de Th . Bern dt 0. Es- rlu, inse r tar una obra, a la que, en general. conside ran bu-
cri ta e n el r iguroso la tín a cadémico , algunas de s us con- ío ne sc a y sa tí rica, en el esque ma de las habituale s p reo-
clusiones resu lta n defini tivas aún hoy . La tesis Iundamen- cupaci ones del pensamiento platónico, Otros au tores , den-
ta l de Be rn dt es que el Merl éx eno forma un todo coheren. tro de esta m isma tendencia, acentúan a ú n más, s i ca be,
t e y que Pla tón ha utilizado magistralmente los recursos 11) profundo, lo comprometido, y rel ega n lo superficial e
de los oradores con el fin de r idi c u liza rlos. Todas la s ex- irónico a un plano secundario. De acuerdo con su inter-
travagancias, exageraciones, anacronismos, e tc ., que nos pretació n, Platón int ent a r ía acomodar estas últimas rna-
es dado reconocer en el texto está n a l serv ici o de u n p ro- nífes racíones a s u obje tivo primordia l de adoptar una ac -
yec to volu nta rio de Pla tón : c r it ica r con sus mismas armas titud c r ítica, con respecto a la si t uació n política o soci al
a los cultivadores d e la re tó r ica , y m uy especialmente a de la Aten as de la época '.
Gorgias. En este sen tid o, no puede ha bla rse de dos pa r-
tes difere nci adas en e l Men éx eno, u na bu rl esca y satí ri- I Pa ra o. W KHMA"''''. PÚI/on. td eetí.. (;es'Jnl/da~sl ..lfung Ulld StuJi..n·
ca, otra ser ia, s ino de una sola es truct u ra, esencialmente .. n A:, Darm'fola dl . 1966, pá gs. 235-243 , el Me" tuno de be inK rib ine e n
,,1 ma rco de la o;o no;epd ó n p latónic" d e la III a n¡.., del iJeal Jel 11",. 1101 0
pa ródica, en la que no tie nen cabida ni la s ideas mo ra les,
11l\ino q ue po 'fo ib ilitil la abs tracc iun de lo rea l y la inc linación hacia la s
ni la s po líticas n i siquie ra las filosóficas. IlH'~ elevadas em p res as, lo c ua l e xp lica ria el tono paté llo;O de l d ' so;ur~ .
A partir del tra baj o de Be r nd t podemos d ist ingu ir tres ~' K.ra lo;s represen ta rl a. de este mod o . u n papd sim ila r a l d e su a pa r t-
gr u po s b ien di fe ren ci ad os de inté r p re tes. Un primer gru- , ¡"n e n el CnI<JI1.(d. n. 15 al te xto ). Po r su pa r te U. VaN W ILAMOW Ill, Pla·
po conc ibe e l Men exeno como u na obra seria, comp rome- 1011, Ber ltn. 1<,1 20 , pá gs. 127 y sig •., sostie no; la te s is JI' q ue el Mettj uno
"S un le st imun io evidente d e l arán de Plat ón po r su strac rs...· a lo s pl au·
ti da, en la qu e los an acroni sm os y demás defor macione s n-nnue ruo s excluaívarnente eso té r icos , co n el fin d e d iv u l~ar sU con cep -
t'iú n d e la su prema ci a de las idea s a ris toc rátic as.
I M. P OH I .~ NZ, A u s P la f{)) Werdeu ir, Be r lín, 1':1 13, pág s , 256·309: p ,
I MI I"¡'U¡;NI>~R , P/ulmlische Schr iíten. l l, Be rlill, 1930, pág s. 219·231; G. K I';N·
J Un comp le to es tu dio de los te st imo nios d e los e scrito res an tig uos "' ¡;'lJ ~ , r ile ar t of persu usiv l1 in Cree,-e, Prin ce ton, 196 3, pag s. 158· 164.
sobre el Mel1 ¿u l1 o p uede ve rse en CLAV AUD, ¡bid., págs. 17-35. • Asl, pa ra P. M. I-l U/lY , "The Men exe nu s recon sidered . , Ph ranesis 11 ,
• TH. B J! RN llT, De irol1ia Me l1 exe l1 i P/altmici, Münst e r, 1881. 2 (1':157), 104 · 114, Jo má s des tacable del con ten id o del Men¿u l1o se ri a e l
156 Dl AL OGOS M EN ÉXENO 157

Fin al me nt e, un te rce r grupo de au tores, entre los que' mórod os de la elocuencia t rad ici ona l, sin tener en cuen ta
sob resa len L. Mérid ier, y N. Lora ux '0, ve, sobre todo. en .uulqu ier ot ra co ns id e ra ción filosófica o moral. Por t al
e l M enéx eno una pe rfecta pa rod ia del arte de la elocuen- motive , Pla tón no ha brí a dirigido s u c r ít ica a un person a-
ci a y un acaba do modelo de - pasuche- e n el qu e se reco- ji' conc ret o. s ino, e n ge ne ral, a det e r minados hábitos de
ge n, sie m pre mat izadas por la ironía. la s exage raciones I•• época presen tes, sob re todo . e n los oradores, No ha b r ía
y deformaci on es ha bituales de los orado re s. A es la te n- II1lcr ido desa u to r iza r ta n sólo a Gorg fas, s ino a t odos lo s
de nc ia in te rpreta tiva pe r tenece ta m bié n el estudio de R. que se se r vía n de l hec h izo de la s pala bras para e n masca-
Clava ud , el m ás reciente y, a nuest ro j uic io, el m á s impor- I al" las ideas; no só lo a Tu ddides, s ino a todos los que In-

ta nte de los que integ ran la amplis ima bibliografí a sobre regr-aba n e n el cam po de la hi st ori ografía los esquemas
el Me n éx e no. Pa ra s u análisi s, Clavau d toma como punto . k-f or ma nt es de los ep itafios; a l referirse, en fin , ir óni ca-
de pa r ti da el t ra bajo ya mencio nado de Th. Bemdt , de men te a Aspa s ia y An tifon te, ha brí a crit icado a los qu e ,
q uien ace pta la cons ide ración de la obr ita como u n lod o lomo ellos , componía n discu rsos -ya fue ra n fún ebres, po-
or ga niza do . e n el que a pa rece n, en es t recha re lación. las lnicos o jud ic iaJes- a partir de p iezas pre viamen te ela-
pa rt es d ialogad as y el d isc urso propia me nte d icho. De lxu-adas 12,
Berndt aprovecha ta m bié n el método de an áli s is para in. La cuestión es, como se ve, m uy co m pleja y. en ocas¡o-
ven t aria r la s figura s de es t ilo y pe nsamiento y las suge- I1l'S , parece q ue la e xéges is só lo ha contribuido a escure.

rencias respecto de la in fluenci a de la retórica y la so fts- rvr a ún más e l s ign ific ado del di á logo , De todos mod os,
rica, sobre tod o de Gorgias. Pe ro s u a nális is va m uc ho más uuu cos a es bien notor ia: Pla tón ha ma nifes ta do en otros
lejos: e n su opin ió n, Pla tón ha brí a com puesto e un a r me muc hos textos s us pu ntos de vis ta sobre el e nc om io y ha
de guerree ", un a de most ración de lo que u n di scurso no dd inido la ve ra ci da d como pr incipa l fu ndamento de la
de be ser, u na expos ición absolu ta mente p aród ica de [os eloc ue ncia I J , Po r es t a razón, las interpre tacio ne s qu e
destaca n en el M etl éx el lO la pa r odi a , la ironía y un objeti-
testi monio de re ch azo de la su pre sión de las medidas eccnómíea a qu e
a mp a ra ba n a lu s h u érfano s d e los de sa pa recldus en la gu er ra . (Cf. n. 8 vo bu rlesco y satí r ico, todo ello cons iderado como un pro-
a l t",,,,¡u .) Pa ra J. vo~ LoEWE ~CLA U , Dcr plato nische . Me neu nos., Stut t- vccto vo lun tario de Platón con tra lo s excesos de los ora-
gart, 196 1, pa gs . 104 y sigs., Platón se ha b rlll propuesto con el dl scu n o 11111"CS , nos pa recen las más coherentes . Por ot ra parte, esas
de jllr u na m ue stra de s u s im patla por la a nt igua Atenas, en o posic i ón a tesis se corresponde n pe rfec ta me nte con la t radic iona l re-
la c iud a d Irepertalts ta y a Ulo ri taria q ue a p<1 rec e en la de sc ri pci ón de Tu .
cid ides. - Los mi smos de rroleros s iguen las tes is de N. ScHou.,Du PIIl '
serva pl a tónica co n respec to a los e pita fios, al men os co-
lo nisc:h e oMelfexe lfoso, Ro ma , 1959; K. GA lsn, PÚlIOIIS u ngeschritbtlle
Leilrt , Stullga r l, 1963. págs. 250-25 1, y. sob re todo, C. H. KAH"', .Plato's 11 CUVAUD, ibid~ pi gs. 88·92, so stiene que las refe rencias a Aspasia

fun e ra l orauon. the mot ive of ¡he M't llexen .. s- , Cla.u ic:a / Pililolog y 58 \ Anl ifon te(Me nüeno. 23S,,·21bc) no s remi ten a la c rit ica p lat ó nic a co n-
( 1963). 22().234, pa ra q u ien el M'en ü en o, a parli r de la su punt a vinc ula. tra e l mé todo de los o ra dores y lo s d i,'ersos géneros de discu rsos , AsV- '
ción que señala en tre Pla tón y Tud d ide s, vend ri a a con s tit u ir, d e hecho, •... represe nt aria los lóeo; poli/llc oi(c1. Menb.eno, 24ge), esto es. las ora·
u na especie de panfleto po llt ico diri gido con tra e l impe ria lis mo a ten iense. . ¡u nn fú neb res e n prim er lu gar, pero. ad emás, lod o s lo s d isc ursos d e
lu L . M 0 1IIWR, P[lllOn. Oeu v res c:o m p f¿It'S (C, U. F.l, vo l. V, Part a. .,mict e r p ub lico . AnlHon te, po r el co n tra río, alm bchzart a la acti vidad
1956J ; d . la in trod ucción 1I1 Me lléxe no, pág s, 5 1-82. N. Lcaaux, -Scc ra re .Id logógra fo, lo s d isc u rso s de carác ter ju tlic ia l (el. Cn MENTE DE ALEJAN'
eon trepo ison de l'o rai so n fun ébre. Enjc u e l sig n ific ano n d u Ménu ¿ne . , P~IA , Sl ro", ata l 36S; PSH! 1J o· Pltt r A~("O, Vid a de los diez o rado res, A tllj ·
l. 'An liqui lé Classi que (1974 ), 172·2 11. fu me S),
IL CI.AV AU D, l.e . Ménex ene•..., pá gs , 245 y sigs . 1I e l. Fedro 259c; 2ó5e; 27 1b; Banqu ele 1911b,198e; Gorgias 522c ,
158 DIAl OGOS MENEXE NO 159

roo práct ica gene ra lizada I ~ , y con la polé mica sostenida cuando ya Pla tó n hab la tomado la deci sión de rom pe r con
po r la Academ ia, desd e los prime ro s momen tos de s u fun - 1" " escue las de re tórica.
dación. con t ra las escue las de re tórica .
En relaci ón con la a utent ici dad del Menéx eno. los di-
ve rsos testimonios de los esc r ito res a ntiguos no dej an lu. N OTA AL T EXT O
ga r a dudas 11, Tan sólo a lgu nos a u tores mod e rn os. pe ro
te necie nt es a la corriente hiperc rí t ica ge rmana, ha n e x- Pu ra la Irad uc clón h emo s se gu ido eltex tc d e la ed ició n o xo nien se d e
1 ll" ~ NtT, Pla tonís 0 P""D. 11I. Oxford . 1903 tre un pr., 1968). De muc ha un-
p resad o sus d udas " . Pero. en general, los es tudiosos de
Il.h.d so n la edic ión f ra ncesa d e L. M tIt. lDIU , Plato n. (kIl VR 5 COPf/pl~te$
la s dive rsas tende ncias son unán imes en este punt o. (l . U. F.l. l. V, Pa ri s. 1931 (l .- ed.), y la ca talana de J . Ou vu C"''' '''l,S, Pla·
En c ua nto a la fec ha en q ue fue com pues to e l d iálo go. ..l, Vialels (F. Berna l Me tge). l. l V, Ba rc elo na , 1952.
podemo s fij arl a con cier ta a prox imación. Entre otro s ana- Enere la s trad ucc iones a otn.s leng uas d estace mcs. la italia na d e G.
croni sm o s. qu e im piden de termina r el mo me nto de la ac- l . MAGNA. Mene$SC'n o, Milin, 19 34, Y la f ran ce sa d e E. CH..... BaY. Pa rt s ,
ci ón, Sócrat es menciona el trata rlo de paz de Ant álcidas, 1 ~48 .

posterior a su m uerte en el 399 . Ell o in dica que el Metl é·


.. tetlO no pu ede se r an terio r al 387 a . e., n i t a m poco muy
BIB U OGRAFlA
pos teri or, si te ne mos en c uenta que no se al ude a n ingún
aconteci miento más t ardío. Es ta fecha se correspondería I.os e slud iosos m,b sobresalien tes so b re el Mt nll!.u n o a parecen d ta '
pe rfect a mente con la de la publicación reci e nte de la As· 01". en la s no lilS a la Introducción. Un" re 5e ña b ib liognlfica mu y como
pasia de Esquines l' y con la de aper t ura de la Acad em ia, 1,lflll puede h alla r se e n e l ya diado lrabajo d e R. CUV A\J!>, Le oMtntd·
..,. d e Pulfo n el IQ ,/lIitori q llt de son temps, Pu b , 1980.
" er. Tu /eto l7 ~a·b; Go'gio:rs 523e; y R ep úb lica 46 8d. do nde Pla tón
s ugie re , pa ra las hon ras a los q ue se ha n d isting u ido e n el co m ba le . hlm -
nos y e rras p re be nda s e n lu ga r d e d isc u rso s. Cf., ta mb ién. Leyes 802a~, .....e mpeñ a ba u n p a pel s im ila r a l del Me lfú e lfo, co mo experl a educado-
a p ropós ilO de los q ue ha b rlln de llega r a l l" nni no d e sus d ias. de sp ués " en la elocue ncia. C U VAUD, Le . Mt nexime•..., págs. 23~25ó, re lacio na
deo ha b eorse d is ting u ido por s us ac ciones. lu .lo s ob ra s y s ugie re q ue la ac tua lidad d e l te ma la cili la e l es ta blece r
IJ e l . P W U IICO. Vida de Puicles 24, 7 ; PRlsn •.No. / lfstltud o ne5 270 ' . mh ién en tre a mba s. un a rel ación c ro nológica. La co mpo sic ión de l Me·
(pllg. ) 47 KF.ILj; H U MÓ(;.. Sobre el Mi tcx/o d e la docu encia 24 {pág. 441 ,,,' uno ~ ri a fijarse no mu c ho liem po de s pué s de la a parición d e la A$·
RAB El; D EMU RIO, Sobre ti esti/o 266 (pá g. 54 RAPU .. AC HE.Rj; AII ls ron lES, " "Iia de Esqu ine s. Es ta últ ima , de a cue rdo co n la s tes is d e los ú ll imo s
Retórica 1 1.367b. 1II 1.4 1Sb; PSE.UDO LoNGINO. De lo 5ublime 28, 2; c ree. n llld ioso s, s uele fech a r-se en lre 393 y 385 a . C. CI. J . HUMBu r, Soc,ate
II0 N, O,a/O , 151. rt 1..5 pnits suCfa' iq uC'5, Pa rt s, 1% 7, p ág. 223.
10 En lre otros, E. Z IOlll'-II, P/a lOlfiscl!e S lu die lf, Tu b inga. 1839. p ág.
145; F. ScHI.I01"""ACItU. Plawn's Wu ke, Berlí n, 1809,11. 3. su prime e l d iá·
lugo in ici a l; H. CA Ff lA UJ<.De / 'o,¡¡iso lf {" nth,e dans J¡¡ e'fU p¡¡fen n!', Va·
Ienc iennes, 1864, págs. 95-97 , s u pon e qu e la man o d e un sofista ha re to-
ca d o e l dis cu rse . U. ~ ON WILAMOWlTZ, en A r;~ o lelC's u nd Alhen , Be rlln,
1893, JI, pá g. 99, n. 35, sost u vo, en un principio. que la pa r te d ia logad a
..ra ap6<:rifa . au nqu e no e l d iscurso. Pos te ri o rmen te. en Plaf ón, Ber iJn,
1920, pá g. 126, re ccn ccíó ta mb ién com o a u té n tico e l di á lo go .
11 E sq uine s, el Soc rát ico, ad ve rs a r io de Pla lOn. compuso un a Aspa·
si¡¡ (d . CIC(iIlÓN , V e ;'lVe'l/;One L 32) en la que ta mb ién la hetera jon ia
MENÉXENO

SÓCRATES, MEH~X E N O

PROLOGO

SÓCRATES . - ¿ De dónde viene Men éxcno I ? ¿ De l á go- 234a


rn, o de al gún otro luga r ?
M EH ~X EH O . - Del ágora 2, Sócrates, y de la sala del
Consejo l.
Soc. - ¿ y q ué a su nto te lle vó , prec isa m en te , a la sa la
del Co nsej o ? Es tá bien claro q ue crees habe r lle ga do a l
t érmino de la educa c ió n y de los estudios filo só fico s y q ue
piensas, co nvenc ido de qu e ya estás c a paci ta do, inclin ar-
l e hacia empresas rnayo re s ' . ¿ In te ntas, a d m ira ble ami-

1 Se Ir a la d el mismo pe rsonaje que aparece como adolescen te e n el


l.i.liJ (en 21t h se le d efine corno u n g ra n d is pu la do r). y ya con mis edad
en el Fedól'l (59bl. do nd e $1: le re p rn e n la co mo u no de los di K lp ulos q ue
..cum pa ñao a Sócrales e n su s ú h imos mom e nto s. El ccmea to del pa rr a -
fu (234a ) pe rm ite co njeturar q ue se ha lla eo la eda d de la efe bta . es dec ir,
1.., dieci oc ho años. y qu e. po r ta mo, ha acced id o a la plena ejercilaci ó n
dr lo s de rech o s ci viles recon ocid os por la ley a ten iens r .
1 El á go ra del Ce rllm ico est aba a l noroe s te de la Acró poli s.
) La sa la d el Con sejo fo rma ba pa rt e de l MeI~óo". tem plo de la Ma-
d re de lo s d iuse s y se hallaba a l s u r de l ágo ra de l Ce rá m ico.
• El pasaje es fue rt emen te irónico. Segun las tes is de Caltcles. en su
disc u rs e del Gt:> ~gias (485a·d ), es her mo so filosofa r en la edad ju venil por-
que de este modo la ftlosoña, fun da menta da en los objeti vos de la p,,¡.
<ida, no pierde s u ca rác te r de estud io libera l. Pa ra c a ttcle s, co mo para

/01. - 11
162 DIÁtOGOS MENÉXENO 163
b go, a pesa r de tu edad, go berna rn os a nosotr os qu e su. MEN, - A nadie; ha n dejado el asu nto para ma ña na .
mus má s viejos. para q ue vue st ra ca sa no deje de propo r- rr co, s in em bargo, qu e serán eleg idos Arquino o Dión l.
cionarnos e n todo mome nt o un admi n is tr ad or ~ de nues- Soc. _ Ciertamen te, Men éxeno . en mucha s ocasiones e
Iros int e reses O? purece hermoso mori r en la gue r ra. Pues, a u nq ue uno
MEN. - S i t ú , Sócra tes, me pe rmites y aconsejas so. mue ra e n la pobreza, se obt iene una bella y magn ífica se -
bernar, ése se rá mi ma yo r deseo; en caso con trario. no. pul rura, y ade más se recibe n elo gio s. po r med ioc re que
Conc reta me n te, hoy he acud ido a la sala del Consejo por. uno sea, de pa r te de hom bres doc tos que no reparte n s us
que sabia que la asam blea se d ispo nía a e legi r a quien ha aluba nzas a la ligera. sino qu e han preparado durante m u-
de pronunci a r el di sc urso sobre los m ue r tos; pu es ya su. \ hu t iempo s us di sc u rsos ' . Hace n sus a la ba nzas d e un a
bes qu e t ienen in te nción de or gani za r u na ce re monia ma nera ta n bella , d iciendo de cada uno las cualidades q ue 235a
fúnebre ' . pllsee y las qu e no po see 10 y ma t iza ndo 11 e l le nguaje co n
Soc . - Pe rfec tame nt e; pe ro ¿a q uié n han elegido ?
• Arq u ino fu e uno de lo s R s ta uradore s de la de mocracia ateniense.
1""10 co n T ras ibu lo . d es pué s d e la caída d e los Tr cin ta . Int rod uct o r , ul·
,,,¡onl<l, de l alfabeto jónico para los d<x:u me nto s. bajo id arcontado d e:
1000 5 lo s jóvrnes po lllicos con ed ucación sofista. la ac tividad ñlosóñcs l' m-lides (404 a. C.). al guno s tes timon ios (p, ej., F<x:IO. 260) le a t ri b uyen
d u rade ra era es te rtl por cua nt o oonsliluia un impo rtan te cond icio namien. 11 11 tp i rGf itJ de gran infl uencia en id PGn..gírico tscc ra rícc . No parece. sin
lO paTa In c uru io n" s de upo prác tico, e n es pec ial para la polí tic a. En .",bar lQ. qu e en el Mt llb e llo la me n ción d e su n om b re re su lte determi-
un diálogo de la Rt pú blicfl I4S1c-<!). Adimall10 rep lica a Sócrates que . todos " ."le pa ra u n enju iciamiento sobre po$ ibles in Huencias. En cualquie r
cu a n tos se entregan a la 1iI000f lll. no só lo en su ju vent u d y pa ra com ple, "'0. id pa pel q ue le co ncede P . M. HIIIlT . en . The Mell eU llld reco n s id e·
la r su ed ucación. sino q ue se man lienen e n ~Ila m uc h o Iiem po. no saca n ,.,1. ¡phróllesis 11.2 [1957). 104- 114). d e acuerdo co n su tes is de que e l
0 11"0 p ro ..ec ho que la in capacidad para scn ir a l ESla do •. (Cf. tam bten M,,,~.uno es . so b re lod o, u na cr nlea co n lu las medi da s económ icu que
Trtl. 17.le. y Fed(m 64b.) Para Pla tón , po r e l con trario . la ñjosoñe era , u rr; mia n las su bve nc iones d el Esta do a 101 h ué rfanos (d _ Lls I-'s. XIX
la co ro nac ió n d e lo do e l p roce so de fo rmecíén h um an a. peRn ne p~ idel~ 11). Yde q ue e l no mb re de Arqu inos vendría a s ugeri r . ju s la me n le.lo co n-
de la q ue la s Ol ra¡ ciencias fo rma ba n p a rte ta n só lo co mo u na me ra e ra- l' .rio, la ben evo lenci a . y la j us ticia en el co nte xto de la restau ración de-
pa de inferio r madurez. (Cf. úyes VII 809c-818d; Rtpúblic~ 525a -53O<:.) 1I"...' r! lica qu e lJe..ó a cabo. es cu a ndo meno s e¡¡alleTado. Cf.. a es te res-
En pue nte a SÓC ra les. la Apofogí~ (29d ) es muy e xplícl ra respec te a su 1'1'<:10. R . C .....VAUD. ú . M b .e:l f,ne. d e PIGro ll el 113 rh ~'oriql4 e de so ..
es fuerzo po r un filoso fa r perman en te . de ah í qu e los sofistas le co ns fde- " "Ips, Pa rí s , 19 80. pá gs. 57 y 257 n. 170. Algu nos co me nta ri llas su gie·
ra ra n co mo el parad igma idea l del in di ..iduo pohtíc a me nte incapa z. Por , r ll, ~n res pec to a Dió n. el o tro o rador c ila do. qu e se lra la del mi s mo
estas rezones , sólo el lono irón ico de l texto no s pe rmhe a pR hen der el I'rrluna,ie qu e c ita J EMoFONTE(He fb .ica s IV 8. 13) co rno embajador e n Pe ro
a Ultn lico pen sa mi e nlo soc r árlcc- pla tó mco, aparent eme nte de svir lu a do . 01. cu a ndo el tratado de Antá le ida s (J9 2).
l Alude a la la mili a de Men h eno. al pa recer fec unda e n d ar hom - t El pasaje recoge, e n el á mb ilo d e la c rtuea pla tó nic a co n tra e l
brcs de ESla do a Ale '"! a s. '1'Jl/lp hi0 5 fó gos co mo elog io(ép pino s). los tópicos más u sual es delg éne-
• Tom ado no e n el senudo d e a ut oridad co n fu n cto ne s e",", rao rd ina. 1'" 111 idea de la «hermosa mue rte. y e l ho mena je de: la ciudad co nc<d iendo
rias. a d ift'ren c ia d e los arco n les o ma gistr ad os ord in ar ios, sino en un • lu~ q ue h an perecido e n e l co mbate u n a sep ult u ra y u n d i, c urso . c r.
se n tido gené r ico. I1IlIJllU¡¿;S. 114J, 2; LIStA S. Epit. 80; DEMÓSTE NIlS, Ep i r. 1; 36, Al ma rgen de
1 Las Ep irdph io.. ceremon ia fú n ebr e d e carácter pú blíco. in stitu ida, ... crit ic a , mat iza da d e ir on(a . cf . por ejemplo . a propós ito de la sepul-
a l pa re cer . po r Sol6n (OtO<; . l.U Il.CIO, Vl11), q ue se celeb ra ba a nualme n- 111111. el to no de de sdén con que Sócrates s e: d ir ige 11 Crit ón: . S e: p ult a m i
te . En e l mom en to de la in humació n en el Ce rámíco d e Jos re stos de los • "" 1pu co mo te pl azca y d el modo q ue cr e aS má s co nfo rme al u so . (F e·
sold ados mueno s. u n o ra dor de signa do po r el Cons ejo p ron unci ab a un .Id" 115e). Para la c ri t ica contra e l epaínos. cf . Ban quete 198d y ss.
di scu rso . (e l. 'r vcroroee. 11 34. 3.} La e lecc ión del Conse jo era ra ti ficada '" N. Losoux . • Socra te cc r urcp oisc n de l'ora i, ,, n tu neb re . Enjcu e l
po r la Asamblea (d. ibi d.; DIlMÓSTIlN IlS, De co ro 285). l l¡(n ifica tlon d u Mé l1 exel1e . , L 'A l1liqrúré Cla ssi qu e (1974). 175. n. lB, ve
164 LlIÁl OG OS MENÉX ENO 165
la s má s he r mosa s palabras. que hech iza n n ue st r a s a lmas. I hu más fue rt e, más no ble y m ás bello . Como de cost u m-
Ensalza n a la c iud ad de toda s la s maneras y a los que han siem pre me acom pa ña n y escuc han conmi go el di s-
1' 1 1' ,
mu erto en la guerra y a tod os nues t ro s a n tepasados que 1 urso algu no s e xtranje r os " , a nte lo s c u ales en se guid a
no s ha n precedido y a noso t ro s mismos que aun vivimo s 1111' vuelvo más respetable. Parece, en efe c to, que ellos, pe ro
nos elog ian d e ta l fo rm a 11, q ue po r mi parte, Menéxcn o, eu..didos por el orador, ta m b ién e xpe ri ment a n estas m is-
a nte s us al a banza s, me s ie nt o en una di sposición m uy Ill US sens aciones co n res pec to a mí y al resto de la ciudad,
no ble y cada vez me quedo esc uchándolos como en- .. la c ua l juzga n más admir able que a nt es. Y est a se ns a-
b ca nta do IJ , imaginándome que en un insta nte me he he- I rón de respe tabilidad me du ra más de tres dí as. E l tono e

aq u l u na pa rod ia de las pri m.,r a s lineas de u n f ragme n to de la o ra ,ión «fluu ta do de la pa labra y la voz del orado r pe netran en
fú neb re de Go rgias (D-K, 8. 6). Pero c f., ta mb ié n. para e ste rec u rso de eu l· mis oídos con ta l resona nci a IS, qu e a d uras pen a s al te r-
la r la s cu a lida de s y d is im u la r lo s defec tos , propio de lo s a u to re s de t p aj·
noi, IsóCu Tl's, B usiris 4. Para la c ritic a a este s istem a , cf. Ba " queu 1980.1 . lO Al pa re ce r la e sis tenc ta de ext ra nj"'ro s a la s cn emo nias f únebres
II Traduzco . ma tiza r ., pero con cibi endo e l lérm ino en un a acep ción ~ l" ,,,m,l. c t. TUCfI>lIlES, 11 34, 4: D p,MÓS T IlN " S , Ep {SI. 13. Se supone qu .. ""
pe yo rat iva . Se alud e a la h ah iJid a d de los o ra dore s para vari a r o co lo. untata mbié n de los ",xt ra njero s d e la ciudad, e inclu so de los aliados.
reu r las palab r as Ipo i k(/lo n l eS en el lulo) . acepciones á mba s válidas pa- t t I' . GA ur HlI!R. «Les XENOI dans les textes at h énie n e», R",vu.. des Éru des
ra la ve rsión de l vocablo gr-iego , co n el fin de co mpo ne r un len gu aj e nbl- 1''''' ''1'' '''\ 114 (1971), 78. Cf., tamb ién , LORAu x, • Socrat e s co n trcpo ison.., »,
garrad o que con fu nd a y ad mi re a l a ud itori o . Cf. la m isma ac epció n neo 111 1 11. 66, Ma s en e st e ca so conv iene te ne r e n cu e nta q ue e l d iscu rso pla·
gutiv a, en Rep . VIII 56 1e; 1I 365b; So fista 226a. El sent ido más p ropio I" " k o es fic ticio ; de lo conl ra rio, ma l p od d a pen sa rse e n la asisten cia
d e l términ o a pa rece en Ion 535d, ~ f. , con el se ntido de «a do rna r e, 15d· ,I ~ u lranje rv s q ue no podría n evita r el e ~ cá nJ alo a nt e e l c úm u lo de dis -
CRAns , Con lra los so fist as 16. 1' " vien es his ló ricas q ue a lo la rgo de l d iscu rso les a lu d..n di reclamen l"'.
II 1'.1po ne r en el m is mo p la no de igual da d el elogio d e lo s mue rtos , (1 CIAVAUO. Le _Mt 'lexi n e » ••• , pág. 81'., n. 25; pág . 149 .
d e los vivos y de la ciu da d evide nc ia qu e no se tra te la nl o de de sa rro llar " Rn: ojo , pa ra t 'lQulo5, de l texlO u na vers jón q ue re speta la id"'a del
un epil(j ph ios fógos, con la al a ba n za es tr icta de lo s mu erto s. cu a n to ro- ' '''' iJ o de la fla u la , s us lrayt ndo me a ve rte r ta n sólo la id ea de re son an-
b re lodo un a mpl io pan eg lric o d e la ciuda d . La práct ica es co mú n a to- ,ta I:naulos.., dK'e, e n efecto, del lenguaje q ue , a gu isa de son ido de Flau ta.
do s los e p ita fios. si Se e xce p téa e l de HIPER IPES. do nde [a mb ima ala. l...ne rra en los o ldo s y deja hu ella ron su pecu lia r re sonanci a. S", trata
ba nza reca", sob,"", el n trat",g a y s us iioO[da dos. er., incl uso, el d e P",ri cl",s , ,1.. un re cu rso a ud it ivo más de lo s incl u idos en la n. 13. Cf. ta mb ién en-
Tucrmn es, 1142, 1-2. El propio ISÓCaATES rrconoc", u tiliza r te rnas ya em . 1<111 54d. do nd e Sóc ra tes e sc uc ha la s voc es d e Las Leyes, con el mi sm o
picados en los ep it(jphipj fógoi a l compone r su Pa 'legr"rico d e At",na s (74). ."nido. Cf., ademas, R epúb lica 399<1; Gorgias SOld oNo me pa rt'CC te ner
(Cf. to... ux.cSOCr a teco nti'C'pojiioOn ...• • 179. eles mo n s oc sont ¡>as secle- " t" llun fu nd amento la Ic s is de: O. WICHOIA" "'I . Pla fo n. Id....ll.. C>(' !Qrn fd.. r-
meo t tvincés p a r la louang'" d", l. po lis, mais o n les perd d ",VU e d ans la ,,~II.mg u nd S " .d ienwe r.l:, Da rm sradt. 1966, págs, 215-243, pa ra qu ien el
se r ie, de ro ulé e d ep uis ¡'o rigine, des gran de s génhati on s d 'Alhm i",ns_.) ' ''l1le:u o de la pa rod ia qu e se construye ron eato e rec ursos, d"'j a paso
lJ Cf. Pr6 liJ g. 315a· b. CL supra, M ",nb. eno 235a 2·3, a pro pó si lo d e • u no má s sig n ifica li vo, el de la nl .. nía o "'Jltu s iasmo socril lico. al modo
0 11'0 té rm ino en e! m ismo ámbito se má n tico : c h"",hiza n n ues lra s a lma .. .lr l Fedro, p. ej., de s ue rte qu e, a su ju icio , co n ello se:ex phca rta el pa rt;'
(goi!l..ú ou sin las ps)"c hás,. el., pa ra gul""a. Corgías. [)'K 82b, 11. Pa ra , .. 1.1' tono del M t nb :eno y s us a llllCTon isrnos. ya qu e la f ue rza mi s ma de:
góis, So fisla 235a 1,8. Se p re se n ta lrénicameme ",1 len guaje de lo s ora- l. ref l",xión se sus lra e a lo s pequeños del a lle s de lo re a l. Wichmarm re-
dor",s co mo u na s ue rte de w rl ileg io q ue hech iza y encan ta a lo s q ue es- ", ite, a d",má s, a l pa saje 235c , e n el q ue Sóc ra te s dice q ue. po r los e fec tos
c uc h an su s di sc ursos. Cl., ta mbién. R epública III 413, c 4. CuvAuo,L .. • Mi · .I~ I .. rad o r, a pen es al te rc e r o cua rl o dl a vuelv e en sJ. Pc ro ca su a lmen te
nu t n e•..., p ágs , 92-95, y n. 47. re m ite, a parti r d e es tos recursos, a Oor- r. l" pa saje e stA sob rado de iron ía y d if íci lme nt e p ueden ve rse en é l hu e-
gias y su escue la , co mo obj etiv e de la iro nla y la cri t ica pla tón ica: . Ce 11". del e n luSIU nlO ta l co mo Se p la nte a en el Fed ro. De lo qu e aq uí se
q u~' Plat o n de, '"" it rcp rouv c r d a ns ce¡ art, c'c st te mcns onge q u i co ns iste lt lila n o es d e sus t rae r se a lo rea l, po r la via d e la ins piración y la pes e-
It uñllser les mots pa r eux-mem es el non pas po u r l'id éc qu'il s e xp ri men!._ , ¡"'n, s ino, qu izás, de s u s tr ae rse a los ar ti lu gios d e la re tórica ab ocando
cr. a este res p ecto , ARISTd TELHS, R nór. 1.405h5. 1" l'" pa cid ad crftlca u lo qu e e S real. cr.. a es te res pL-<: lo , CLA V~u u . Le . Mi-
166 DIÁLOGO S MENÉXE NO 167

cer O cua r to día vuelvo en mi y me doy cuenta de l luga r 111" se elogia, no cuesta m ucho pa recer que se habla
de la tierra donde estoy; ha sta entonces po co falta pa n. Iur-u - .
cree rme qu e habitú en las Is las de los Biena ve nt u rad os "; ME N. - ¿Tú no lo c rees. Sócrat es ?
has ta ta l pu nto son d ies t ros nuestros orad ores. Soco- Desde luego que no , por Ze us.
MEN. - Tú s iem p re te estás riendo de lo s orado res. MEN . - ¿ Acaso crees que tú m ism o se r ias ca paz de ha- e
Sóc rates. Es ta vez, sin em ba rgo . n eo q ue el designad o no blur, s i fue ra p reciso y la el ección del Consejo reca ye ra
ten drá m uchas faci lidades 11; la elec ci ón ha s ido decíd l- 111 ti?
da de repen te, de mo do que quizás el orador se verá obli . Soc. - En efec to, Menéxeno, na da de extraño tiene qu e
gado pr oba ble mente a im pro visa r . ~ tl l¡un b i é n sea ca paz de ha bla r, pu es casualm en te tengo
d Só c. - ¿ Por qué, m i bue n amigo? Ca da uno de és tos 1"1I· maest ra a un a m uje r muy ex pe r ta en la retórica, que
tiene d isc ursos p repa rad os y, además. impro visar ,. so- mect sa mente ha fo rm ado a m uc hos o tros e xce lente s era-
b re t emas de es ta cl ase no es difici l. Si fu e ra preci so ha- I !l UI' S y a uno e n particu la r, que sobresale e ntre los de Gre-
bla r bien d e los a tenie nses ante lo s pe1opo ne s io s o de 105 , 111, Pericles, hijo de J a nt ipo .
pel oponesios ante los a te niense s. Se nece sit arla un bu en M EN. - ¿Qu ién es e lla? Es evidente que te refieres a
orador que conven ci era y se ganara la a probación del Allpas ia Jl , ¿ no?
a ud itorio 1'; pero cuando se comp ite ante aq ue llos a qu¡e- SOC. - A ella me refiero y a Conno ", el hijo de Me-
tl uh io. Ellos son m is dos maes t ros, el uno de mú sica, la 23601
011111 de re tó r ica. No es nada e xt raño q ue u n ho m bre edu-

nnenl' ~ .••, pág . 45 . J u sta mente <':l1 e ste palHllje no s en cont ra mo s en el punto ,u dn as í. sea hábil e n e l habla r . Pe ro, incluso, c ua lq u iera
cu lmin ante de la iro nl a del pro lo go . Pu e s e l lec to r fácilmen te pod rla pre- '11I t' ha ya recib ido una ed ucació n infer io r a la mía, instruí-
gun ta rse cómo quedarán de atu rdido s los que es<: uch a n los dis cursos an te
.In en la m ú s ica por La m pr o j ] y e n la retór ica por An t i-
el cú m ulo de h a bili d a des del ora do r, si el propio Sóc ra te s, en pos e sión
de u n mé tod o qu e bu sca siem p re III verda d (d. Ap% g{a 17b), no pued e
esc apar a l a tu rd im ient o. '0 El carácter agonJstico de la ora ción f únebre (d. LISIAS, lip i/afio
,. Otro pu nt o c u lmi na nte de la iro nla: las Islas d e los Bien a ven tu. 1, Ih,." ÓSTl'.NI'.S, Epi/afio 1) es tá en rel ad ón con los d i-.cursos an teriormente
rados son u n á mbito prop io d e héroe s, o de pe rsonas de vida exce len te 1"" " un d ados y ya co noci dos. En 239.:, 1, la rivali d ad se s ilúa e n la con -
e ir rep roc ha b le, pe ro un á m bi to pa ra des p ués d e la mu e rte. Cf. Gor,l ilu " " " tad ó n con lo s poe la s .
52J d; Fl'dón l ll a-c; d . tam bie n Rep u bfica VII 540b; en la pa ro dia , Só- " e l. la In lrod uc e l6 n.
cra tes lóg ica me n te encarna a culliquie ra de los aten ienses q ue oyen lo s " Mae stro de cit ara d e Sóc ra tes . al que és te se ref ie re s iem p re con
d is<:unos . Cf. LollAux, ~Socra tes cont ra po ison ... ~, 182.13 3. ''''Al le n a iro n la (et. Eutidem o 272c; 295d ). Pod rt a tratarse del mism o
11 No se dice, como p ienSil. LoIlA Ull, ib i d., 196, que el ora do r no va t..., I< >n aje que es obje to de bu r la por AaISTOfAN I!$(d . A. rispas 675 ; Caba.·
a ten er ma teria qu e trata r en el d isc urso, s ino que no tendrá m uc h as Ia- /I,ms 534; d., tam b ién , V . V()lOj W¡U MOWlTJ. PIafÓ'" Berlín, 1920, p áll. 139)
ci lida de s reu pori u in}, p or el poco t iem po qu e med ia ~ tre la e1~ ción y ~ 1''''" Cu n No(Fr. 317 Kon:., men cionad o, co mo en Cabal/ero s 534, con
la celebra ció n d e la c eremo n ia fúneb re . Es te l Ópos de 111 b re ve d ad del ,1 ,Ie riva do pcyo ra livo K on nas}, y del q ue toma 5U no mb re un a comedia
t iempo del o ra do r (d . liSIAS, Ep ita fio 1) ya ha sid o contestado en 234c; ,t.. I'a fNICO (11 37 1 KOCk l y otra de AMEIf'SI. S (1 67 1 Kan.).
d. la respues ta de Sóc ra te s a Mené .l'. e no , en 235d . 11 Mae stro d e música d e Sófocles. e r. Vida de Sófocles 3, 19·20, pá g.
" Para el arte de la improvisació n y su pri nci pa ltc6 ri co , Alcid amas, 'V III PEAR SON.Cf. tambi én C. N E,o TE.Epam 11; ATEN EO,I 16; 112. La a lu-
d. CLA VAUD, Le . Mi n exi l1 e ~ ..., p ágs . 101 y sig s. 01"'" a C-on /1O , romo , n im ismo , 3 Lam p ro, pod rla aim bohzar la crülca
19 Cf. AR I5TÓTI'.LES, Retórica 1 1.367b , Y III 1.41 5b ; d. CLAVAU D, Op. .lil illidBco ntrá Go rllias, a propósito de su técnica de la a nnon la, q ue busca
cu., p ágs . 86·87. . IIlh los efec to s d e las p a la br as por s í m isma s que po r su con ten ido . c r.
168 Dl lÍl O G(lS M l'.NÉ X F NO 169

ton re de Ra mnunt io J', se ria igua lmente ca paz, al a ba ndo Soc. - Pero ta l vez te bu rl es de m i. s i. viejo como s oy .
a los aten iense s a m e los a tenienses, de obte ne r renombre'. lo produzco la impres ión de que a ún j ugue teo como u n
MEN. - ¿ Y que podría s decir, s i t uvieras que hablar? ' 11'10 .
b Soc. - Tal vez na da de mi propia cosecha; pe ro aYC I MI'.N. - En a bsolu to, Sócrates. habla de todos modos.
precisamente es cuché a Aspa s ia q ue elaboraba una c ru. SÜc. - Pu es bien, s in duda de bo complace rt e; ha sta el
c í ón fúneb re comp le ta so bre est e mismo tema. Se habla 1'1In!<l de que incluso s i me pidie ras qu e me qui tase el mano d
e nt erado de lo m ismo qu e t ú dices. de que los a te nienses 1.. }" danzara. ca si te haría el gu sto . pu est o que esta mos
se d is po ní a n a e leg ir a l o ra dor. Ento nces. de im proviso. , .. Io j,. Escucha . pues, Empezó ha b la ndo , segú n c reo, de
e x pus o an te m í u na pa r te del d isc u r so. según lo q ue e ra 1" muer tos m is mos y decí a así:
p reciso deci r; pa ra la ot ra pa r te, q ue ya tenía pen sada de
a ntes, de c ua ndo. segú n c reo, com puso la o ración fú ne-
bre que p ro nunció Pe r tc les, ju nta ba a lgu no s rest os de es- D I SCUR SO D E AS PAS IA
te disc u rso ".
MEN. - ¿Y po drías reco r da r lo q ue d ecí a Aspa sia ? «Por lo qu e toca a los ac tos ", es tos hombres han re-
So r . - Si no pudie ra, me se n tirí a cu lpa ble, Lo a pren- rthklo de no sot ro s las a te nciones que se les deb ían y, t ras
e dí a de ella y poco falt ó pa ra qu e me gol pe a ra porqu e me I ec-ih it-Ias , e m p re nden el cam in o fijado po r el dest ino,

flaquea ba la memor ia , o" em pa ña dos pú bli ca men te por la ciu dad y pr-ivada me n-
M EN. - ¿ Po r qué , pu es, no me lo e xpones? l o' po r s us fa milia res. En lo que co nc ierne a la palabra 17.
Soc . - Pe ro qu e no va ya a e noja rse conmigo m í pre- 1,1 ley o rde na t ribu ta r a estos ho mb res el post re r home- e
ceptora, s i divu lgo s u d iscurso. II'- ¡{·. y ",110 es un de be r. Porque con un d isc u rso be llame nte
M EN, - No te ngas c u idado, Sóc rates , y ha bla. Muc ho r-xpucs to sob re vie ne el recuerd o de la s acci ones glo ri os a-
me co mp lace rás. ya sea q ue qu ieras con ta rme el dísc u r- mente ef ec t uad as y el home naje para sus a u to res de pa r-
s o de As pasia, o de cua lquier ot ro. Ha bla sol a me nte , h' de los qu e las esc uc ha n. Se requ iere. pues. un discurso
CUYIoUD,Ú . Mb . u t l1 e•...• pá gs. 94-9S. Cf .• en el mismo ámbi to d e s ign i. 1.11 qu e e nsalce cumplida mente a los mu e rtos y ex ho rte
ficación. lil!i ref e re ncias al SOCI ido de f laula de las pa la b ru de l ora dor, Ion benignidad a los vivos. recomend a ndo a los deseen-
ya la ima gen de la poihila [rrn . 11 y 15). (1 , Me" ixtn o 235a ; 235<:, dientes y hermanos qu e im iten la virtud de es tos hombres.
lO CUYIo\Il>(Ú' . Mblut ne •...• p lg s. 83-92; 265 Y s igs.) h a deja do bie n
Vda ndo á nimos a los padres. las madre s. y a los aseen -
cla ro <¡ ue Asp.uia sim boliza h. elocue nc ia conc ernien te a 10 5 d isc u rso s
pu b licos. m ren rras <¡ ue la a lu sió n a An li fon te hac e refere ncia a l género die ntes má s lejan os qu e aún queden. ¿Qué disc u rso se no s 237 0
j ud icia l. A p ro pós it o de es te úlumc, d . TOC' DlDU. V 68; Ct.uolENU DE ALE' n-vel a ría como ta l?
lIoNDII'.... S /ro nra/a 1 365. Cf. la Im rod ucci6 n . n . 12.
n No hay po r q ué reconoce r a q ul e l fu nda me n to de u na polém ica
c on l ra Tuci d ide". co mo s ugie re buena pa rte d e la crttica Ir a d ic ion al del
Me l1 é.u l1 o. La c riti ca va d ir igida , sob~ 1000. en es te p asa je co ntra el me- 10La o po s ici6 n érgon / Iógos hace refe rencia a la s hon ras de b id a s
tod o ole compo~ i ción de las p ieza s o ratcnas. c u a lq uiera que fue ra su ge- 11 los m ue r tos: la se p u lt u ra (los fu ne ra le s) y e l discu rso fú ne b re . Cl. 11.
ne ro, a b a~e de la so ldad ura , en bue na pa rle de la s m isma s, de Ir07.os 'J. El pas aje p ued e ponerse en relació n cc n TlI CIDIrlF.S, lI 35 , pe ro u na opc-
an te riormen te e la borados. Cf, CL4V"'U D, Le . Mé l1 exe l1e . ..., pá g s. 96 y sigs. . id ó " semeja nle pu ed e ha lla rse tamb ién en ot ros ora do re s. er. L IS IAS ,
A ~p ¡u i a s im bo liza tal p roceso de e la bo ra ción de los d isc u rso~, se an [ ú - ¡'.pitufio 2 ; D ~;M ll snN Es , Epi ta fio 13; HlP ~_IU lJ l'.S , Ep i/a fio 1-2,
nc bres o no . /1 cr. T lICC!> IDl'.S, Il 4 6.
170 DI ÁLOGO S ME',N¡!Xl'.NO 171

,,1 [ulcio de los d ioses que po r él ri vali zaron e~t re si 1'1, S i


I,, ~ d ioses lo ha n el ogiado. ¿có mo no va a se r Jus to que lo
E l.OG IO DE LOS MUERT OS
luv, ien todos los hom bres ? Se le de be rí a en ~u s l i cia ot ro
.logio. Qu e e n aq uel ti e m po en que toda .Ia tl err~ prod u-
It¿ Pa r dónde d a r ía mos comienzo correctamente a l ele , In y had a c recer a nima les de toda especre, sal vajes y do-
gio de uno s ho mb re s valientes. qu e en vida alegra ba n mesti ces, e nto nces la nuestra se mos t ró es té r il y ,lim pia
los s uyos con s u virt ud y que han ace ptad o la muerte II Ilc' best ia s sa lvajes y de ent re lo s se res vivos esco gi ó pa ra
ca mbio de la sa lvació n de los vivos ? Creo que es preci so al y procreó al hom bre, el cual sobresa le e nt re los de más
hace r s u elog io según el orde n natural e n que han sido VII ' ''1es po r s u in te lige ncia y es el ú nico e n recon ocer .u na
lientes. Vali e ntes lo fueron po r ha ber naci do de valie ntes. lul't licia y unos dioses, Una p r ueba import an te de m i a ro e
Elog iemos. pues, e n primer luga r. su nobleza de na cimicn lIl ulllcnto de que esta ti e rra e nge nd ró a nu es t ros .a nte pa -
b to y. e n segundo lugar. s u cria nza y educación . Despu és
' Mios y a lo s de es tos homb res es que todo se r VIVO p ro -
d e esto, mostremo s c u á n bell a y dig na de ellas fue la eje I ,,,,¡lIl or t iene el a limento ap ropiado pa ra su crta. y e n es-
c uc ión de su s acc iones. Primer funda men to de s u noble 10 !'le d is ti ngue cl a ra mente la mujer que realmente es ~ a­
linaje es la proceden ci a de sus an tepasados, que no cm rh c de la que no lo es, pe ro lo fi nge. si no lle va c o n ~ l go
foránea n i hacia de s us descend ien tes unos metecos en el IlIlI luentes del alimen to para el recién na cido. Pue s bien ,
paí s al que habl an venido desde otro luga r, sino que eran nuest ra tie r ra y, a l pro pio tiempo. madre no s da un,a pru e-
a utóc tonos 1< y ha bit ab a n y vivían realmente en una pa- hll convince nte de que ha e ngendrado ho m bres: só lo e lla
tria, criados no como los otros po r un a madrastra. sino 1' 11 aqu el tie mpo produ jo, la p ri m e ra, un alimento idóneo
po r la ti erra madre en la que ha bit a ba n, y ahora, desp ués pura el hom bre. e l fruto del trigo y la cebada, c~n el c ua l 238a
e de mu e rtos, yacen en los luga res fa milia res de la q ue tos le' alim e nta el gé ne ro humano de la man e ra mejor y más
d io a luz, los c r ió y los acogió. Por ta nt o, lo má s ju sto es
lv-lla, po r ha ber engendrado en reali dad ella m isma est e
tributar, e n pr ime r lugar, un homenaje a la mad re mis - ecr "'. Y este tipo de pruebas convie ne ad miti rla s más pa -
ma, porque de es ta fo r ma resulta en alt ecid a. ade más, su 111 la t ie r ra que pa ra la mujer: no ha imit ado, e n e fe~to ,
nob leza de na cimiento .
111 tie r ra a la muje r e n la gestación yen el a lu m b ra rnlen-
- Nuesr ro pa is es d igno de se r a la bado po r todos los
lu, s ino la mu je r a la tie rra. Y no ha rese ~ad.o cel osa~~n te
hom bres y no só lo po r nosotros, por m uc has y d ive rsa s
pnra si este fruto . s ino que lo ha d ís u-ibuido t am b l e.~ a
razones, la pr imera y p ri nc ipa l porqu e resu lta se r a mado lus dem á s. Des pu és de es to, ha s us ci tado para su s hiJOS
d de los d io ses. Da fe de esta opi nión nues tra la disputa y elnacim iento del aceite. a ux ilio co nt ra las fa t igas. Y des- b
pué s de haberlos c r iado y ha be rlos hec ho c recer hast a la
1< El le ma de la au roc roma e s otro de los tó p ico s h abitu a le s d e las
o ra ciones fú ne bre s. el. LISiAS , Ep ita fio 17; DEM ÓST ENES, Epi /afio 4; HIPE'
RIDES, Epitafio 7. El pasaje su ele po nerse en re lación co n Tu cIDID ES, JI 1'1 Aten ea y Po seid ón r ivaliz a ron ent re s( po r da r nom b re a la ct u-
36, pero conviene tener en cue nta que éste hab la más bie n de los Atenienses .tnd, resu ltando ve nced or a Aten ea . Al margen d el conte xto paródico de l
co mo p ueblo esta b le, que co mo a u tóct ono, térmi no que só lo utili l a a pro- Ak"éu"o, d. el ve rd ad ero pensamiento pla tónico con respc."<:to ~ las cre en-
pó sit o de los h ab it ant e s de 5 id lia . ef. ibid ., 1 2; VI 2, Y tam hién , a p ro pó- , ¡UH sobre la s dis p uta s de los d iose s en R epública 37 8 b-e: C" tras I09b,
sito de es te tóp ico fan ta sio so, ¡SÓCRAT ES. Pa negírico 24; Panat eneico ,1" ",le la posi ció n con t ra ria eS evi de n te. ,
124· 125; HERÓIlOTO, VII 16 1. .\tJ cr. DI'. MÓSTE NES, Epitafio 5: lSÓCRATES, Paneg{rlcu 28.
172 lJJÁLO GOS M EN ÉX ENO 173

juve nt ud . ha int rod uci do co mo s us go be rn a ntes y ed uco 1I n .ponde en su m a yor pa rle a la m ayoría , q ue c o ncede
do r e s a lo s d io se s. c uy os no m b r es - q u e ya cono ce m os In ~ magis t ratu ra s y la aut o r idad a qu ien es pa re ce n se r en
co nv ie ne om it ir e n una ocas ión co mo ésta J' , Ellos huu o,ula caso los mejores. Y na die es excluido po r s u e nde-
o rga niza do nuest ra vid a de cara a la exis tencia co tidfn II!I' I fís ica , por se r po b re o de pad r es desco noci dos JI, n i
na, a l habe rn os ed ucado. los p ri m e ros. en la s a rtes y ha hllllpuCO reci be ho n ra po r los at r ibu las contr a r ios, co m o
be r nos e nseñado la a dqu isic ió n y el m a nejo de las a rmu • uc u ra s c iuda des. Sólo e xiste una no r m a: e l q ue ha pa re-
para la defe nsa de nues t ro pa ís ". o Idu sen sa to u ho nes to de te nta la a u to ridad y los cargos ,

«Na cido s y ed uca dos de es ta fo rma . los ante pasados ti" I ¡¡ ru usa de es te s istema po líti co nue s tro es la ig ua lda d e
estos mue rt os vivían se gún el r égi me n polít ico qu e había n .!l. uarimiemo. Po rq ue o t ra" ciudades es lá n integ ra da s po r
e organizado. e l cua l es o po rt u no r ec ordar bre ve mente. P Ul hom b re s de t oda c o ndic i ón y de procedencia desigual, de
qu e un régimen po lít ico es al imento de los homb res: d " "' rte que so n ta m b ién desigua les sus fo rmas de go bie r-
Jos ho m bres bue no s. s i es bue no, y de los m a los. si es lo nu. tira nías y oligar qu ías. En e llas vive n u no s pocos co n-
con trar-io n. Es necesario. po r tanto, dem os t rar que nucs nh-run do a lo s demás co m o escl a vos y la mayor part e te-
tros padres han si do criados bajo una bu ena forma de gu HII'Ildo a és tos po r a mos. Noso tros, en cambio, y n uest ros
bierno, merced a la c ua l también ellos fu e ron virt uos o" Ill'/IIIanOS, nacidos todos de una sola m a d r e, no nos co n- 23911
como lo son los hombres de hoy, en tre los cuales se ha. . hkr:.mo s esclavos ni amos lo s unos de los ot ros, sino que
Ila n es to s m uert e s aquí p res entes . Pue s esta ba vigent e en. In Igualdad de nacimiento seg ún natur a leza no s obliga a
tcnces. como a hora. el m is mo sistem a po lit ic o, e l gobier- hll ..ca r una iguald ad po lít ica d e a cue r do con la ley yana
no de los mejo re s. qu e act ualme nte nos r ige y q ue desde hnl'Cl"no s co nces iones los unos a los o t ros po r n ingú n o t ro
aquel la é poca se ha mant e n ido la m ayor parte de l jie m. mott vo qu e po r la es t imac ión de la virtud y de la se ns a te z.
d po . Unos Jo lla ma n go bierno de l pue blo . o t ros le dan o t ro »De a q u ¡ que, c r ia dos e n ple na liberta d Jo los pad res
no m b re, seg ún les p lace, pe ro es, e n realidad, un gob ier- ,l., es to s m ue r tos , q ue so n ta m bién los nues t ros, y
no de selección con la a pro bación de la m a yo rí a . Po rqu e • • tos m ue r los m ismos, de no ble c un a, adem ás ha ya n
reye s s iem p re te nem os " : unas veces lo so n po r s u hn a- mos trado a todos los ho m bres m uchas accion es be llas , pri - b
j e, o t r as veces po r elección. Pe ro el po der de la c iuda d co- \ lIIla y p ú bl ica me n te . co nvencidos de q ue e ra p recíso c o m-
lnuir po r la libe r ta d co nt ra los g riegos en favor de los g rie-
l¡!o" y co nt ra los bá r baros en fa vo r de t od os los gr iegos.
JI Al pa rec er, e ra im plo no mb ra r a lo s d ioses olím p ico s e n la s ce.
re moni a,. fú nebres . t runo rec ha za r o n a Eumolpo y a la s Ama zo na s J7 y a
» Alenea y IId es to, Que ense ñ an la s ar tes , y Ares , que en señ a el uso ulms au n antes que a e llo s, qu e habi a n invad ido e l pa is ,
de la. a rmas. el. U yu XI 920d·e; Btmque le 197a.b . ... romo def end ieron a los a r givos co nt ra lo s ca d meos y a
lJ 1I " ~ o ~i nió " muy d ife ren te ju s to la co n lra ri a. " pa rec e ref leja. 1m he rac lidas co nt ra los a rgtvos " , el tiempo es co r to pa-
da en R ep u b ll C~ S44d·e. er., ta m b ién, ibi d., 435a.
lol con ta r lo d igna men te. Ade m ás , tos poeta s ya lo ha n da-
... ef., so bre el ti po de go bierne , idént ico parece r en T Uc1D IDES , lI J7
y 6 5 ; y, as imismo , LJ S l ~ S, E'pi tafio 17·1 9; D EMÓSTENES, Epilafio 25-26; reo.
ekAlIe• . Ptm ale n ui co 1J 1; A eropag tüco 20. En cuan to a [a in va ri a ble exts- " eL r ucroro ee. H 37.
tCllcia d e un sólo gob ierno, la mayo r- pa rt e del tiempo, el con tex to paró. " Cf. ¡bid., 2, 40; IsÓCIlAH.s, Punegz"n"co 52·53.
"hm es cYuJe ntc; el, la upi n io n "pu est a en Rep ti bli<'u 54 5c, 546a. Busilis \1 eL L I S I ~S, Epitafio 3 ss.; I sllcR ~TES, Panegírico 66 ss .
(<< reye s . ) se re fiere a lus a rcontes , \O Cf. H ER ÓDOT O, IX 27; JEN OFONT E, Helén icas VI S, 46.
174 D I Á LOGOS M E N ÉX E NO 175

do a conoce r a todos, cele bran do e n s us can tos magnüt l ' I ~' I I' x t o
qu inie nt os mil hombres en barcos de tran s po r te
cemen te s u virtud . S i, por ta n to, nosotros ln tenr áramr ~ ,l.· gue r ra y t resci entas na ves a l mando de Dati s, co n la
e cele bra r las m ismas hazañ as e n prosa, quizás pa recer! lO' .1"11 de que regresara conduciendo a los eret r ios y a los
mos in fer iore s. Por es tas razones creo q ue debo pa sa r Pv " nlcn ses, si quería cons e rva r su cabeza. y Da t is, tras na- b
a lto estas ges tas, pues ya tie ne n ta mbién s u es t imación '11111" e n di recc ió n a Eren-l a . con tra un os homb res qu e s e
En camb io. creo que de bo recorda r aque llas otras, de 1111 '''l1 lllba n entonces e n t re los más fa mosos de los gr iegos
c ua les ningún poe ta ha obtenido un a fa ma digna de terna u rl a r te de la guerra y e ran no JX>Cos, los some tió e n t res
ta n d ignos y qu e a ún está n e n e l o lvido. haci e ndo s u ele ,hlllo ' J y. pa ra q ue nin gu no pudiese hui r , escudriñó lod o
gio y facilit a ndo a ot ro s el camino pa ra qu e las ínrrodu 1pub del mod o s igu iente: una vez que llega ron a la s Fro n-
can en s us cantos y e n otros t ipos de po es ía de u na man l. I il li de Eret ria, su s soldados se s ituaron a inte r va los de

fa di gn a de los que la s h an llevado a cabo. De las hazaña 11 1"1 11 ma r y, cogidos de las manos , recorr ieron todo e l e
d a q ue me refi e ro . he aquí las prime ras: a los pe rsas, qu I' l1 h~ , para po der decir al Re y que ninguno se les habla es-
e ran d ueños de As ia y se disponían a somet e r a Europa. , II pudo " . Con el m is mo propósito. desde Eret rt a desem-
lo s de tuvieron los hijos de esta t ie r ra, nu est ros pa dres, h'" l'nron en Ma ra t6n, creyendo que les era fá cil co ndu-
a quienes es jus to y ne cesario que recordemos e n prime!' 1 11 ta mb ién a los atenienses. de spués de haberlos some ti-
lu gar para e na lte ce r su va lor. Si se qu iere hacer un buen do 111 mi smo yugo que a los de Eretr¡e . De es tas acci o-
elogio, es prec iso obse rvar ese valor trasladá ndos e por l. ' ''' . , unas habian sido ya efectuadas y las otras estaban
pa labra a aquella é po ca , en que toda Asia estaba sometí- 11 punto de llevarse a cabo, pe ro ninguno de los griegos

da, ya por tercera vez, a un rey. El pri mero de ellos, Ciro, 1'1n. tó ayuda a los de E retria .~ ni a los atenienses. excep-
tr as conced er la libertad a los persas, so me tió con la mis- ." l ll~ lacedemonios - pe ro éstos llegaron al dla siguiente
e ma sobe rb ia a sus propios conciuda da nos y a los medas, .Ir 111 bat aJla- ..; todos los demás, a te rrorizados , se mano d
su s se ño res, y pu so ba jo s u mando el resto de Asia hasta h ntun inactjvos. dichosos de su seguridad presente. Tras-
Eg ip to JO; s u hijo puso ba jo el suyo Egipto y Libia, hasta l.ultlndose a aquel mo me nto , se com p renderla qué vallen-
donde le fue posi ble pen e t rar oo. El tercero, Daría , fijó 11 e Iueron los que reci bie ron en Mara t6n el asalto de los
240a po r t ie r ra los limit es de s u impe r io hasta los escitas. Do-
mi na ba con s us naves el ma r y la s is las, de mo do que na- .. En foC"is d las. seg ún H EltÓDOTO, VI 101. c r.• ta mbitn, pa re e sta ex-
d ie se a tr-evía a e nf rentarse con él ", y la s opi n iones de 1,,,lId ón , Leyes 111 698c.
todo s los ho m bres se ha lla ba n some tidas a esclavitud : ¡tan .. H ERÓDOTO h a bla de la mis ma táctic a pe rs a ref e rida a e rres ept-
nu me r osos y gra ndes y belicoso s e ra n lo s pue blos que el . ,,<l 1"5,e o 11 1 149; V13 1. c r. el esc e ptic is mo d el m ismo Pla lón respecte
• " 1" es tra ta gem a en Leyes I11698d . v ee se. ta mbi én, pa ra e sta cuestió n ,
pod e rlo pe rsa habla s ubyugado!
l' W~, lI., L 'a rchéologic d e Plato" , Pa rí s, 1959, pág s , 149·150.
«En tonces Da do, tr as h a be r nos acu sado a nosotros y " Cf., sin em bargo, Hee ocoro. VI 100.
a los ere tríos de conspi rar con tra Sa rdes 01, envió con ese lO No se men ciona el con tin gent e d e m il so lda dos de Pla lea, que a yu-
01" "", a Jos atenie nses. cr. H ERÓ DOTO, VI 106·10 8. Cf . Una dis l in la ve r -
lo C f. Tucfll 'llJ!ti, 1 16; H I!MÓDOTO,I 75·83; 127; 162-200. ."'11' del episod io en Leyes, 111 698d·e. En cu a n to a la tardanza d e lo s lace·
40 CL H ERÓD OTO, III 1·13 . ,I" " ,,n ios en llegar a Maratón, el m ismo P lal ó n la jus tifica po r les Imp e -
4' cr. ¡bid., JIl 144; 15 1· 159; IV. ,1I1I,,"nl0 5 d e la gu e rra de Me senia. Cf. Leyes U I 698e. cr., t am bién , para
4l cr, ¡bid ., V 99· 103. ~ " r upísod ¡o, H I!R ÓDOTO, VI 106; 120 .
176 DIÁ LOGOS 177

bárbaro s. cast igaron el o rg u llo de toda As ia y ertgienn l!l b gr iegos que, gracias a los que co m ba ti e ro n por ti e-
los primeros. un trofeo sob re lo s bárba ros. co nvir uéndr ll lt y po r mar, a p re nd ieron y se a co stumbraron a no te-
se e n caudillo s y e nseña ndo a los demás q ue el poden mer a los bárbaros.
persa no c m in venci ble •.y q ue toda m ult it ud co mo tuJ . Me nc io no en te r cer luga r, tanto por el n úm e r o como
e r iq ue za ce de n a l va lor. Yo a firmo . pues, que aque llos hum pUl" el va lo r, la gesta que, po r la sa lvación de Gr eci a, t uvo
br es fu eron los padr es no sólo de nuestra s person as , s in luga r e n Pl a tea " , ta re a común en es ta ocasión a la ce de-
también de nu estra li be r t a d y de la de todos los pueblo Ilionlos y atenien ses ". To dos ellos r ec ha za ron la amena-
q ue habi tan en es te contine nte. Con su s ojo s puesto s ('11 IU más gr a nde y temib le, y por su va lor aho r a no so t r os
aquella empresa, los gr iegos tuvie ro n la a uda cia de a rr it,. 11l1l; CmOS su e logio y en e l futuro n uest r os desc endientes. d
garse e n po st er iores guerras por su sa lvación, con vlrtién 1'1'1'0 después de estos sucesos, m ucha s ci u da des griegas
dose e n d iscl pu lo s de Jo s ho m bres de Ma r a t ón. esta ba n a ún a l Iado de los bár baros , y se a nun ciaba q ue
»Nue st ro d isc urso, pu es , debe o to rga r la pri me r a di I Rey en pe r so na te nia Inten ció n de a taca r de nu e vo a los
24 !a t ín ct ón a aq ue llos ho m bres. La se g unda. a los qu e c om 1" iegos. Es, pues, justo que r eco rde mos ta mb ié n a aqueo
batieron en las batalla s navales de Sa lamina y Art lIos que culm inaron la em p resa sa lva do ra de sus prede-
m isión . 1 y resultar on ve nce dores. Po r que de estos hom l esores, limpiando el mar y expulsando de él a todo s los

b r es también se po d r ían co n tar muchas ha za ña s, que húrba r os. Fueron éstos los que combat ieron con la s na-
asa ltos sos tuv iero n po r t ie r ra y po r mar y cómo los re \/es e n el Eurime donte '10, los q ue pa r tic ipa ron e n la ca m- e
c haza ro n. Pe ro lo que, t am bié n de e llos, m e pa rece m é pnña co nt ra Ch ipre ' l y los q ue h ici e ro n la ex ped ición a
glorioso, lo reco rda ré d ici endo q ue coro naron la obra co Egip to n y a o tros m uchos p a ises. Es preciso qu e les r e-
me nza da po r los de Ma r a tón . Po r q ue los de Ma r ató n só lo rordernos y les ag radezcamos ha ber logra do qu e el Rey,
b había n dem os tr a do a los griego s que por ti erra er a posl- atemor -iza do, pensa r a en su pro pia sa lvació n e n luga r de
b le r echa za r a un gr a n nú mero de bárbaros co n pocos maquina r pa r a la r uina de lo s gr ieg os .
ho m bres, pe r o co n na ves aún era d udoso y lo s persa s te- . »Nues tr a ci u dad to da , pue s, sos tuvo hast a el fin a l es -
nlan fama de se r inv encibles en el mar por nú mero, r rq ue- tu gue r r a cont r a lo s bá rbaros po r ella m isma y por o tros 242a
za, ha b ilid ad y Fuerza. Es to, p reci sa men te , me r ece se r ale- pue blos de idé nt ica lengu a . Pe ro u na vez hecha la pa z, y
bado de los ho mbres q ue en to nce s com ba tieron por ma r: cua ndo n uest ra ci u dad gozaba de respeto, le lle gó lo qu e
que d is ipa ron el temor que poseía a los griegos y pu s fe- huele sucede r de pa rte de los hom bres a los q ue ti enen éx í-
ro n fin al m iedo qu e le s in s pi raba la multitud de na ves l u : primero una rivalidad y, después de esta rivalidad, una
y de hombr es . Resultó, pues, qu e po r obra de unos y o tr os, envid ia 11. Y es to pu so en guerra a nuest ra ciuda d, c on-
e los qu e comba ti eron en Maratón y los que par t iciparon Ira s u voluntad, con los griegos. Despu és de esto, ini c ia -
e n la ba ta lla na va l de Sa lam ln a, Fue ron ed uc a dos lo s de -
•• ef. H EIIÓOOTO, IX 6- 12; 30-32 .
tJ No se me nc iona la ba ta lla d e la s Term épiles. Ta mpoc o a 105 alia- •• Cf. ¡bid., 28·29; LI SIAS, Epi/alío 46-47.
0.105 q ue lom a ron pa rte e n la s ba talle s d e Art em is i6n y Sa lam ina . y c uyo
'10 Cf. TUc/ OlDU , I 100.
con cu rso fue deci s ivo . Cf. HU ODOTO, V!U 1·2; 44·4 8; véa se , l amb i ~n, Le· I I Cf. ¡b id., 1 112 .
y es IV 707 c-d . Pa ra la p resenc ia de los aliado s , d . LISI ~ S, Epil<jfiv 34, y JI el. ibid., 1 109· 110.
ta mbi én , ¡bid., 3(l.31 , a p ro pós ito d e Arlem isi6n y de la s Termó p ílas, II Cf. LISI ~S, Epita fio 48.
~ 1. - 12
178 DIÁ LOGOS ME N~XE N O 179

da la guerra, vinieron a las manos co n los lacedem onio ' IU I<.lO que cont ra los pueblos de la mi sma estir pe es pre-
en Tan agra. combatie ndo po r la libert ad de los beocl u (I 'm combat ir hast a la vic tor ia . y no de st ruir la com uni-
b La ba t alla tu vo un resultado in ci e r to " , pero la acc ión ".HI de los griegos po r el resentimiento part ic u la r de una
que le sucedi ó fue deci si va . Po rque e l enemigo se rer¡ru 1 tud ad, y cont ra los ba rb aras hast a la des tr ucci ón. Son,

y pa r t ió a ba ndonando a los q ue socorr ía n , mie n tras lo IlIlr tanto, d ignos de elogio estos hom b res qu e re po san
n uestros, vencedo res en En óñto » , a l cabo de t res dhu 'Illul des pué s de ha be r hec ho esta guerra. porque a quíe-
hicieron vo lve r co n j ust ic ia a los injus ta me nt e dest erru. Il t~ !'> soste nlan qu e en la a nterio r gue r ra co nt ra los ba r ba-
dos. Es tos hombres fue ro n los p rimeros. después de 1111 ru s otros ha bla n s ido s uper io res a los a te n ien se s, les de-
gue r ras médica s. que a yuda ron a unos griegos cont ra mos t raron q ue no es taba n en lo cier to. De mos t raron e n- e
e ot ros gri ego s en defensa de la liberta d . Se com po rt a ron tunees, a l s upe ra r a la Grecia s ublevada e n la gue rra y a l
como vali e ntes y. después de ha be r libe rado a los qu e so- ru ptu ra r a los caud illos de los demás griegos, que podía n
corrí a n, fueron se pu ltados los primeros en este monumen. vence r con su s propias fu e rzas a aque llos con lo s q ue un
to con la ven eraci ón de la ciudad. dio habían ve nci do a los bárbaros en común.
• Despu és d e es tos acontecim ientos, la guerra se gene - »De spué s de esta paz, so brevino una tercera guerra
ralizó y tod os los griegos hicieron una expedición contra Inesperada y t errible, en la cual perecieron m uchos va-
nosotros lOo, devasta ndo el pa ís y pa gando de un modo in. lt entes qu e reposan aq ul. Mu ch os murieron en la región
digno la gratitud deb ida a nuestra ciudad . Los nuestros, de S ícilia. después de haber erigido numero sos t rofeos por 2430
después de haberlos vencido en una batalla naval y de tll libertad de los leontinos j f , en cu ya ayuda hablan acu-
ha ber captu rado a sus jefes, los lacedemonios, en Es- dido, en cu m plim ie nto de los pac tos 10 , navegando haci a
d fagia " , aunque le s era po s ib le darles mue rte, les pero aq ue llos lu ga res. Pero como a causa de la longitud de la
donaron la vida . los devo lvie ro n 'la e hicieron la paz . peno rruvesía .Ta ci udad se hallaba en dificult ades y no podía
e ux tlía r los " renun ci a ro n a est a gue rra y sufrieron re ve-
, . Dlooo llo. XI 80, con{inna es te ext re mo. sin embargo. TUcfDl DU . ses. Su s enem igos . incluso después de haber combatido
I 108. a firm a que resull aron ve ncedo res los la ced emon ios. CIJo VA UD. Ú co ntra e llo s. t ie ne n para s u se nsa tez y va lor más elog ios
. Mb,ed ne.... . pÍlg. 132. n. 114, se p regunta s i el tesumo mc d e Dio do ro IllIe para los ot ros s us propios a mi go s. Muchos m u rieron
no habrfa s id o in l1uen cia do eoe el Me l1b :e rto.
11 er. TucfDID ~S, 1 108. Re fie ro a kQ/igQ gort la expresión trit¡ htl'l1 ¡'
tam bi én e n la s bata lla s na val es del Heles ponto, t ras ha-
fQ e n el te xto griego. con la l de so sla ya r ta nlo la idea d e u n co mbat e d e ber apresado en una so la jo rn ada todas la s naves e ne rni-
tres dtas d e d urac ión e n En óñto, como la de un a ba tall a li b ra da e n Enb.
Fito a l ca bo de tres dl as de la Tan ag ra. Bl testim onío cit ado d e Tucidi des y¡ TUc fDIDES. tU 86, atesli gua q ue el au l ~n lico mot ivo de la e ltped i-
dic e, e fec tiv amente, que la expedición co n tra Beoc ia. e n la que tu vo lu.
gar la bata lla d e En éfltc, se lle vó a ca bo a los ses en ta y do s dta s de la
'."'ne ra cortar el ap rov ision ami ento del Pelo pon eso.
..., En realidad, h ubo dos expedlcíones . La pr imera tuvo lugar en 426
Tan ag ra . Por o lra parte, s eg ún el me ncionad o tes timonio de DIOlJOROla ~ C. (ef. TucfDlDl! s,lU 86·90), con-el pretelt to de los leon tino s. La seg un·
batalla se re solvió e n u n día entero (d. Xl 83). d" , con el p ret exto d e su so licitud po r parte d e los eges teos. tuvo luga r
lOo Tampoco aq ui se hac e me nci ón de los a liados con qu e con ta ba t'n el 415 a. C. (cf . ibid., VI 6 ss.), Esta últi ma, desde luego. no fue u na gue ·
A t en<l .~ . cr. T\)clDIDI' S, 11 9. rre . ines pe ra da., como se d educe del amplio testimonio de TucfOIDES liOb re
11 cr. íbid., IV 8. r l debate en tr e Nic ia s y Alcibi ad es (ibid ., VI 7·25).
l' En rea lidad, los pri sioneros no fu eron devue ltos hasla después de 1I Segú n TUcfDlDF.s (cf. VII 16 ss .}, Atenas envió dos expe díc jo nes de
la palode Nicias . cr. ibid., IV 31·41. uuxlllo.
180 Dl ALOGOS MENEXENO 18 1

b gas y ha be r venc ido a mu chas otras .1 , Cuando di go que n-hem os recor da rl o s y el ogia rl os siem pre. Pues gracias d
la guerra fue terrib le e ines pe rad a. me refiero a q ue I () ~ " . u va lor ga na mos no sólo aque lla batalla naval, sino ade-
de más grieg os llega ron a un grado ta l de celos contra nues Ino" el resto de la gue r ra . Graci a s a ellos la ciudad ha ad-
Ira ciud ad. qu e se a t re vie ron a negoc ia r con s u peo r cm' qu trido la fama d e que jamás sería sojuzgada e n la gue-
migo. el Rey " . A aquél a qu ien hablan e xpulsado e n co- I Iu. ni siqu iera por todos los hom bres: repu tación cierta,
m ún con nasal r os, de nue vo 10 ha ci a n ve nir por su inícíu- pues he mos s ido de r ro tados po r nu estras p ro pia s d íse n-
tiva. un bárba ro contra los gr iegos, y re unía n co ntra nue s. nones y no por lo demá s. Aún ho y no he mo s sido venc i-
e rru ci udad a todos los griegos y los bá r ba ros. Aquí, c tcr- dus por aque llos ene m igos, sino que nosot ros mismos nos
tamen te , se manifest ó ta m bién la fu e rza y el valor de la Iu- mos vencido y derrot ado.
ci udad. Pues cua nd o c reía n qu e ya es taba ve nci da y sus "Des pués de estos aco nteci m ientos. una vez que se re s-
na ves bloquead as e n Míttle ne. e nviaron un a ay ud a de se- tablcc ió la calma y se hizo la paz con los otros. la gue rra e
senta naves, en la s qu e embarcaron los mismos ci udadn. , Ivil se desarrolló en t re nosotros de tal for ma qu e. si el
nos y. most rá ndose como hombres valero sts tmos. según desti ne de termina ra a los hom b res a tene r d isensiones .
la u ná nim e o pin ió n. vencie ron a los e ne migos y libe raron nnd!e desearl a que su prop ia ci udad s ufrie ra de a i ro ma-
a los amigo s ..; pe ro, víct ima s de una s uer te in me recida , llo es te mal. ¡Con qué buena di s posici ón y fam ilia ridad
s in que pudieran se r recogidos del m a r, repos an aq uf ~l, . ,. on t re me zclaron los ci u dada nos en tre s i, ta nto del Pi-
t,·u como de la ci udad y. cont ra toda es pe ran za, co n los
u Cf. JI.NOFOt<TE . lIelén ica I l. 12: S I." trata de la ba talla de Ctc fcc demás griegos! ¡Con qué co med im ie nto p usie ro n fin a la 2441.1
(4 10 a. C.). Sin embargo. Jen ofonte a firma q ue no pud ieron apre sar 1.. auc rra con los de E leu sis! ... Y la causa de tod o es t o no
de los sirac u....DOs. a las que ésto s pr en d ieron fu ego. En cu an to a las . mu· tuc otra que el pa rentesco real. que pr oc u ra una am istad
c has o tra s naves_ que fueron venc idas, seg ú n el t""' to. to do pa rec e Indl- . ólida, fun dada so b re la com unidad d e lin aje , no de pa la-
ca r q ue se tra ta de una re ferencia a Olr as bata lles de re su lt a do más o
me n os inci er to para lo s ate niens es, co nc re ta me n te Cyno sema y Se s tos. hru sino de hecho. Es prec iso t a mb ién recor dar a aque -
el. TO CrD IDF.S, vm 105 s s. llos que en esta gue r ra pereci e ron . víc umas uno s de otro s.
u Se ref iere a l trat a do de 412 a. C., co ncertado y renovado po r 101 y reconciliados e n la med ida e n que nos sea po sib le. con
lacede mo nio s y sus a lia do . con el rey d e Pe rs ia . Cf. T liCfDIDf.S , VIII 18; plcgartes y sa c r ificios, e n ceremonias como ést as , ínvo-
36-37; 57·59. Tam b ien en 408 a . C, se llegó a u n acuerdo entre Esparta
y Pen ia (d. J ENOFON TB . Htléni CfU 1 3. 13) y, en 407 a. C.• se se lló la allan,
cando a los que son sus dueños s", puesto que también
1.3 de .Lis a nd ro co n Ciro (er. ibid.. 15, 5-101.Sin e mbargo. ta mbién los ate- 1I11M>t ros es tamos reconciliados. Pue s no llega ro n a las ma-
nienses hablan enviado ya una em ba jada al Rey (d . TUcrOID ES, IV 50) e, nos . unos con t ra ot ros, por m aldad n i po r od io, s ino po r b
inclu so, h abla n conce r tado un tra tado de paz (d. ANDÓCIDf.S, Sob re la pa z U Il azar adve r so. Nosot r os mismos, los que vivimos, 5 0-
29).
ruos testigos de e llo : s ien do de su mis mo linaje. nos pe ro
.. Ba ta lla de la s Arginusas (406 a. C.). Sin e mba rg o. J ENOFONTI! ha'
bte de cient o di ez na ves a tenie nses , má s d iez d e Sa mo s y t rei n ta de lo.
resta ntes a liad os , h as ta un to tal de ci en to c inc u en ta (ef. Helén icas I 6.
16). En CUMto a la exclusiva pa rt icipac ión a te nien~. tam b¡~ n hNOFON' .. Cf. JE NOI' O NT E. Helén icas It 4, 24-43. don de los h ech os roe na rr an
TE co nf irma q ue , po r el co nt rari o , hu bo un a rno vihzacíón gene ra l, q ue de muy di s ti n ta ma ne ra, ta nto en lo toc a nte a l co mpo rt a m ie nto de lo s
incluso co mprendía 11 lo s e scl a vos (ef. ¡b id .• I 6, 241. I rd n ta. como con res pec to a la act itud de lo s at en ien ses co n los e nvia·
u Se en tien de en un a tumba ficticia, disp ues ta con e l fin d e celeb rar Ilos de Eleu s is, a q uie nes d ie ron mu ert e.
el e ncomio d e los de~ lI parecidos e n e l comb at e. Cf. t ucroroes , JI 34. "1 Alusión 1I los d ios e s infe rnal es. Cf. n. 31.
182 D IÁ L OGOS 183

do namos mutua mente lo que he mos hec ho y lo que hemos .1..b¡l". En ef ec to, e n aquel t ie m po no fuc ca paz de r nos-
s u fr ido. I, ¡t ,,:-oc firme y man tener la deci sión que ha bía t om ado de
..Después de esto, re sta b lecida po r com ple to la paz c n 11" ayuda r cont ra la es clav itud a n ingu no de los que la ha - 245'1
t re nosotros. la ci udad se mantenía t ranquila , perdonan luun tra ta do inj us tamente, si no que se de jó do blega r y los
do a los bá r ba ros que se loma ra n c um pli da ven ga nza dC' 1 «co r r t ó. Tras pres ta r a yuda e lla mi s ma a los gr iegos, los'
mal qu e ella les ha bla hech o, e indign ada con los griegos hbcr ó de la esclavitud 11, de modo que fu eron lib res has-
e al reco rda r có mo ha bla n paga do los beneficios q ue elb lu que de nu evo ello s mi s mos se h ic ieron escl a vos ". Al
les d ispensó, u niéndo se a los bárbaro s. des t r uye ndo la l(el no se a trev ió a soc or re rl o por res peto a los t rofeos
nave s que e n o tro tie m po fueron su sa lvación y a ba tien .1,· Marut ón, Sa la mina y Pla tea, pero a l permit ir qu e sólo
do las murall a s. a cambio de las c ua les no sot ros había - 10\ e xiliados y voluntarios acudiese n en s u a yud a, lo sal -

ma s im ped ido q ue las s uyas ca ye ra n". \0, segú n op inión unánime 1'. Y despu és de ha be rse ree-

«Resuelt a a no de fen de r m ás a los gri egos en caso de .hficadc las murallas y habe rse con s truido una flota , acep- b
ser esclavizados lo s uno s por lo s otros o po r lo s ba rba- ro la gu e rra u na ve z qu e se vio fo rzada , y comb a tió a los
ro s, a sí transcu r r ía la vida de la d udad. Mie nt ras est aba . tnrcdemoníos en fa vo r de los de Pa ro s ".
mas en esta d ispo sic ión, los lac ede monios cre ye ron que - Per o el Rey, te meroso de la ciudad, c ua ndo vio quc
nosot ros, sal vado res de la libe r tad, est á b amos abatido, 1,,, lacedemonio s renunciaban a la gu e rra por mar, que-
d y que e ra as unto s uyo redu ci r a los de m ás-a la esclavit ud I l it a bandonamos y r ecl am aba a los griegos del cont inen-

y lo llevaban a la pr áct lca " . n-, que a n teriormente los lace de monios le habían
»Pe r o ¿qué necesidad hay de ex te nde rn os? Los aco n. rnrregado ", si había de seguir comba tie nd o con nos-
te ci mi e ntos q ue po dría conta r después de éstos, no son n l l os y los demás aliados, creyendo qu e no acudirla mos
de un t iempo leja no ni de hombres de ot ra ge neración 1<1. , qu e esto le se r vi r ía d e p rete xto a su defección. En c u a n-
No sotros mis mos sa be mos cómo recurrieron a nuest ra I n a los ot ros alia dos se e ngañó: los cor in tio s, los a rgivos e
ci udad , despa voridos, lo s p rimeros d e los gr iegos, los a ro \ 1, 1,> beoc io s y el resto de los aliados cons int ieron e n e nt re-
givos, los beoc ios, y los cori nt ios; y có mo, lo más e xrra or-
d ina r io de to do, inclu so el Re y llegó a un grado tal de di - l ' cr. Tucfl>lOES. t 10 .
11 e l. J ENI>FONTE, lId tnicQ.s IV 2. 8.
fic ulta d que, a l cambia rs e para él las tornas, de ni ngu na
Il e l. ¡bid., v 2·4.
o t ra pa r te podla llega rle la sa lvació n s ino de esta ciudad l~ Alude a la ay uda q ue pres tó Conó n a los penas. co n el consenti·
e q ue con tanto a rdor ha bía que r ido destruir. Y, cíertamen- "' I" ntu at e nfe n se, en la luc ha con tra lo s laced emon ios. Segú n ISOC\l:"TES
te , s i a lguie n qu isiera hace r a nu est ra c iudad un repro- t, I l: l'(i gu 'Q.s 52·571. Conó n aseso ró a lo s pe nas so b re la co nve n iencia
c he jus to, sólo uno podría hac érsele con legi tim idad: que .1.· hace r la gue rra cont ra lo s lacede monios po r ma r . El Re y le encerne n-
.11', ,.[ "'ando de la Hora, con la q ue venció a lo s lac ed ... monios en la ba ta-
s iem pre es com pas iva en ex ceso y se c uida del más 11" " "val de Cn ido (394 a. C.). el. ls oc rr., Fi/ipo b3.
11 La refe renci a a es ta camp añ a ha pro movido no pocas enm ien dils

.. e l. JE NOfONTE. Helenices 11 2, 20. .11 ,-1 texto. WIl_",.UWlTz. Pluto", pág. 13b, Y CL"V"Ull, l. ... • Métlt1:t t,e.....
.~ cr. ¡bid" III 2. 23. I' '' ~ s . IM·187. sugieren q ue se alude equ ¡ a la tomad e Pa ro. pur Pusín o s,
10 E ste es el pasaj e cu lm ina nte d e to das las d istorsiones his tó ri cas 1"'1h"l laje de._co noci du, de la q ue nos of rece te st imo nio ]SÓ CRATE S. e n s u
q ue ha n aparecido e n el te xto, pues tal es acont eci m ien tos son tod os pos - I ~ 1PI i1¡ c (J 18.
te r iores a la m ue rt e de SÓC ra tes. l. el . Tucrunu.s , VIII 18.
184 DIÁ L OGOS ME NÉXENO l BS
ga r a los griego s del cont ine n te, lo ac e pta ro n por escru
y lo fir ma ron. si es ta ba di spues to a darles di ne ro. S610 11
sen-os no osamos ni e nl regá rselos ni pre st ar j u rameut E XHORTA CiÓ N A LOS VIV O S
Así es en ve rdad de segura y sa na la genero sidad y la i
depe ndenc ia de nu est ra ciu da d, hos til por naturalez a »Bst as so n, pues , las obras de los hombres qu e repo-
d bá r ba ro , po rq ue somos gri egos puros y s in mezcla ¡J til ll uq u¡ y de lo s o tros que han muerto e n defensa de la
bá r ba ros 11. Pu es no habitan con nosotro s ni Pelops 1I t hulad ; num erosas y be lla s la s q ue he e xpues to, pe ro más

Ca d mos ni Egiptos o Dánao s, n i tantos o tros q ue son bilr nume ro sas a ún y m ás bell as la s que om ito . Muchos días b
ba re s por na tu ra leza y gr iegos po r la ley, sino q ue he b \' noc hes no basta rfan a l qu e t uviera la id ea de e numerar-
tamos nosotros mismos, griegos y no se m íbar ba ros , ti I ¡¡ ~ todas. Es preci so, por t anto, que, a l recor darlas, cada
donde el od io puro a la gen te e xtra njera de que está i ti llo recom iende a los descendientes de estos héroes que,
huida nuestra d uda d. A pe sa r de eso, fui mos dejados ~ ' " 1110 en la guerra, no de serten del puesto de su s a ntepa-
e los una vez má s po r no quere r pe r petrar un acto V~ tAlius ni retrocedan cedi endo a la coba rdía. Yo mi smo,
go nzoso y sacrílego en t rega ndo unos g riegos a los bA I I' UI' S, hijos de va lientes, os lo recomiendo a ho ra, y en el

ba ros ". Llegados, pu es, a la mi sma s it uac ión q ue YII


ante r iorme nt e había ca us ado nue s tra de rro ta, con la ayu
da de los d ioses term inamos la gu erra mejor q ue antes,
.r
futuro , cuando enc ue ntre a alguno de vosot r os, también e
lo recordaré, y os exhort a ré a de s ear vivamente s er lo
lIlft ~ valerosos po si ble. En esta ocasión es ju sto que men-
porque de s ist imos de las hostili dades conser van do las nn t tune lo que los padres nos enca rgaban comunicar a lo s

ves, las mu ra llas y nuest ras p ropi as co lonias ", de tul que en cada ocas ión deja dan, s i les pa saba a lgo, c ua ndo
manera que también los enemigos las finalizaron con agr u _ l ' dlspontan a afro n ta r un peligro. Os repetiré 'o que de

do. Sin em ba rgo , también pe rdimo s hombres va lientes {' JI ellos mismos escuché y lo que con agrado os diría n, si pu -
es ta guerra, víct ima s de las di ficu lt ades del te rreno en Co, .hcran. conjet u rá ndolo de lo q ue entonces man ifesta ba n .
246a rinto y de la traición en Le q u e ón 10. Tam bién fu e r on va I e n é¡s que imagin ar, por tanto, qu e escuchái s de su s pro-
le rosos los que libraron a l Rey y expulsa ron del ma r a 101 rnos la bios lo qu e vay a e xpone ros.
la cedemonios: yo os los traigo a la memoria. A vosotros ..He aquí lo que dec ía n ":
corre sponde juntar vu estras ala banzas a la s mías y glon- 'Muc hachos, que soi s de padres val eroso s, es t e mismo d
fic a r a ta les héroes. «rt o de a hora lo de m uestra: a unque po dlamos vivir s in he-
110 1', escogimos mori r con honra, antes qu e precipi taros
n vo so t ros y a vuest ra po steridad en el op ro bio y antes de
des hon ra r a nues t ro s pa d res y a tod o el lin aj e q ue nos ha
11 el, n . 28. pr ecedido, convencidos de que no ha y vid a po sible para
,. Re fe re nte a la pa z de An lá lc id a s (387 a. C. ); d . J EHOf'OHTE, Helt qu ien de shonra a lo s suyos y de qu e un ho mbre tal no tí e-
n it""-li V l . Del tesumoníc de tsóU.ATES. Plmeg(riro t 75. se ded uce que lo.
a tenienses t uvieron i M:ual res pon sabilid ad y lU:lilu d qu e lo s lac ed emonio. •• Se ¡nte ia aho ra la prosopo peya de los muerto s que se dirigen, pri-
en la aceptacíén d e las cond it" ione s de la pal o "''' ro. a su s hijo s y, pc etenc rmeme. a sus pa d re s. Es ta in no vación, e n
7'J Cf. JENOfONTll, lIe1én Ít"I1.$. V 1. 28-31.
r l nmbítc de la o radón fún eb re, aco ge s in e mbargo un a se rie de tÓp ico s
10 Cf. ¡bid .• IV 4 , 6; DIOllURO. Bihliulecli 14. 86. ueunle s. Cf. R. C LAVA U D. Le . Mb lexeneo..., págs. 203 y aigs .
186 DIÁLOG OS MEN I!.X ENO

ne n ing ún a m igo ni en tre tos ho m br es n i e n tre los di ese .'A nue stros pa dres, s i aún viven , y a nu est r as m adres'
ni so bre la t ierra n i bajo la tierra después de m ue r to. r" l/a preciso e xho rt a rlos s in cesa r a so po rtar de la mejor m a-
preci so, pu es. que recorda ndo nuest ras p ala b ras. cual nera posible la desgracia . s i se llega a produ ci r, y no la .
e qu ier ta rea q ue em pren dá is . la re a licéis co n virt ud, sa be montarse con e llos-no necesita rá n q ue se les a llija , pues d
do res de q ue, si n e llo. lodo lo de m ás, las a dquis icio nes y I info r t unio acaeci do les ca us a rá s ufic ie nte pe sar-c . s i-
las actividades son vergonzosas y viles. Porque n i la r iqu, l to. c uida ndo los y ca lm ándo los, reco rdarl es qu e los d ioses
za da p rest igio a q u ien la posee co n co ba rdía - un hum lI,m esc uc ha do sus principales súp lica s. Porque no ha bla n
bre ta l es r ico para o t ro y no pa ra s í mism o-,- , n i la belte p"d ldo tener hijos inm orta le s s ino vali e ntes y famo sos &l.
za de l c ue r po y la tu erza asoci a das a un cobarde y malvu V es os bi e nes. qu e se c ue nta n ent re los m ás gr a nd es . los
do parecen apro piadas, sino tna pro pta da s, porq ue ponen lmn obten ido. y no es fá ci l para un m o r tal qu e, e n el c u r o
m ás en ev id e ncia al que las t iene y revel a n claramente MI " . de su ex istencia, todo s uceda s eg ú n deseo. Soport a ndo
247a co bardía. En fin, toda ciencia sepa rada de la just icia y de vntl rnem e las d esg racias, parece r á q u e rea lme nte so n pa-
las d em ás vir tu des se re vel a como as tuci a . no como sa b¡ dr es de hijos va lerosos y que ellos mi smo s ta mbién lo so n: e
d ud a. Po r es tas r az ones, en prime r Jugar, en últi mo lu . 1, por el co nt rario , ce den a su dolor, le van ta rán la sospe-
gar y en todo momento. intentad po ner vues t ro empeñ o chu de que no so n nue stros padres o de que qu ien es no s
en aventajarnos sobre todo en gloria a no sot ros y a Jos que.' e logfa n mienten. N ing una de las do s cosas es conveníen-
nos precedie ron. En ca so contrario , sa bed que, s i nos t r, sino que e llos deben se r q u ienes, so bre todo. nos elo-
o tros os superamos en vir t ud, n ues t r a vic toria nos ave r 1l1e.'1l con su cond uc ta. mostrando cla r a mente q ue so n hom-
g üe nza, mi en tras q ue n uest r a der ro ta. si somos vencido s, lu cs y en ve rdad padres de homb res. Po rqu e hac e ya t iem-
nos hace fe lices y so bre todo se ríamos ve ncidos y vos. po qu e e l dicho nada en dem as ía par ece ace r ta do ". y
b otros nos venceríais. s i es t uv iera is di spuest os a no hace r n-ahnente lo es. El ho m br e qu e ha ce depend er de s i m is-
m a l u so de la gloria de vuestros a nte pasa dos y a na díla- 11 10 to do aquello qu e co nd uce a la fe licidad o se le a pro xi- 248a
pida rl a , sa be do res de qu e para un ho m bre que c ree te ner mu, y no lo s u pedi ta a o tr os . cuya bu e na o m a la fo r tu na
a lguna va lla na da ha y más vergo nzoso qu e pre te nd e r q ue torza r ta n ta m bié n a la suy a propia a flo ta r a la de r iva, ese
se le es tim e no po r s i m is mo s ino po r la repu ta ción de sus hom bre tie ne o rdenada s u vida de una ma nera ó pt ima; ése
a nte pa sa dos . Los ho no res de los pa d r es son pa ra s us de s- ~' s el sa bio , ése e l va le ros o y sagaz. Y ése. sob re todo, ta n-
ce ndien tes un teso ro bell o y ma g nífico. Pero ha ce r uso de IU s i le vie ne n r ique zas e hijos como s i los pie rde, dará
u n teso ro de d inero y ho no res y no t rans m it irlo a los des. I l éd ito al p ro ve rb io: no se le ve rá ni de masi a do a le g re ni
cendientes , po r no haber a dq ui r ido u no m ismo bien es pero de masiado tris te, po r qu e confia en sí m ismo " . Asl pre- b
sonales y bue na fama , es ve rgo n zoso e in di gno de un n-nd em os q u e sea n ta m bién los nuestros , lo dese amo s y
hom b re. lu afir m amos, y as¡ no sotros m ism os nos present amos ho y,
e . 'Si ponéis e n p rá c tic a esto s co nsejos, ven d r é is a no s-
o tros co mo am igos a casa de am igos, cua nd o os traiga aquf . 1 el. LI S I,t,S, Epi/afiD 71-79 .
.. Mé x\ma a lri bui d a a u no d e lo s S il'le Subio s_ Vé<> se 1' r<Jl ú ~ " rus
la sue rte q u e os es té reser vad a. Pe ro s i los desc uidáis y \4Ja. b; H ESl o DO, Trab aj os)' Días 40. el". 1. D EFR ,t,DAS, L es Th érnes de la
os most r á is cobard es, nadi e os a coge rá de buen g ra do. Que I", ¡palien lde d elphi qu e, pa r ís. 1954 , pá gs. 274-278.
se diga esto a nu es tros hijos. ~4 Cf. Repú blica 387d-e.
188 DI Á LOGOS M F N f X F NO 189

n i ind ignados ni te me rosos en exceso si te ne mos qu e ItIU 1.1 má xima m agistrat ura vigila r que los pa dres y las rna-
r ir a ho ra . Ped imos, pu es, a n ue s tros pad res y a nu es tra .11 ''s de los m uertos, más que el rest o de los ci uda da nos ,
madres que, s irvié ndose de es ta misma d isposición , p 111 1 sea n vic t imas de la injusticia , A los hijos la ciuda d m is-

se n el rest o de su vida y q ue sep an qu e no nos alegra ran 11M contr- ibuy e a educ a rlos; de seosa de que s u o rf a ndad

más co n quejas y la mentos, s ino qu e s i los muertos li In" pase inadve rt ida, asume a nte ellos las fu nciones de pa-
e ne n alguna se nsación de los vivo s, de ningún o t ro medo rhe mient ras a ún son ni ño s y, cuando llegan a la eda d adu l-
no s podrían d isgu st ar más q ue haci én dose daño y dejan I ¡l , II IS env ía en poses ión de s us b ie nes, de s pu és de ha be r-

clase a bru mar por la s des gracias. mi entras qu e mu c hug l o ~ re vestido de una a rmad u ra com p le ta: ella les e nsena
no s a leg rar la n s i la s so po r ta ra n con lige re za y mesura \ les re cue rda la s haza ñas de sus padres , dá ndo les los ó r-
Porq ue nues tra vida te ndrá e l fin má s be llo que ex ista pa liI,mus de l va lor pate rn o y a l mi smo tie m po, a modo de b
ra los hom bres. de s ue r te que conviene cele bra rla más qu buen a ug urio, el pe rmi so pa ra e nt ra r por vez pr ime ra a l
l a ~e nl a rl a ; y e n c ua nto a n uest ras mujeres e hijos, si !i4" hugu r pa te rn o para gobernarlo con fo rta leza , re vest idos
cu idan de ello s, s i los mantie ne n y ap lican a ell o su men ,1,' su s a rmas . A los m ue rtos mi smos no deja de honra r-
d le , tal vez ol vide n mejo r su infortun io y lle ven una vldll 1"..: cad a año ce lebra en com ún pa ra todos la s ce re monia s
más be lla , más rect a y más ag radab le a nosotros, Es suf IIUI' I:S costum b re cele brar para cada uno en privado, Ade.

cien te con qu e co m uniquéis es to, de nuestra parte, a nue 1II;\s de esto, es ta b lec e ce rtáme nes gimnás t icos e hipicos
t~o~ parientes , A la ciudad le recomendaríamos que se nol ~. concur sos mu sical es de todo t ipo " , En una pa labra,
hi cie ra ca r go de nues t ros padres e h ijos, educando con u-s pcc to a los m uertos oc u pa el luga r de heredero y de
veniememen t e a los unos, y manteniendo dignamente a hi jo; respecto a los hijos, el de pa dre, y respecto a los pa- e
los otros en s u vejez, Pe ro ya sabemos que aún sin nues .III's de éstos, el de tutor, de d ican do tod o su c u idado en -
tras recomend aciones, se cu idará de ello s ufici ente nulo mo me n to a todos .
me nt e ' " . -Con estas reflex io nes, debéis sob relle var con más
»Es tas pa lab ras, hijos y pad res de los m uertos, me ha n uanqu ilid ad vue st ra de sgracia . Así s e rí ais mas que r idos
e e nca rga do lras,mi tí rus las y yu lo hago con la mejo r bue na para los m ue r tos y pa ra los vivos y os se ría más fá cil da r
volu nta d de qu e soy ca paz , Po r mi pa r te pido, e n nombre nu-uc io ncs y recib irlas. Y ahora qu e ya vosotros y los de-
de ellos, a lo s hijos qu e imi te n a su s padres y a los ot ros más todos ha béis llo rado a los m uertos segú n la ley,
qu e te ngan confianza sob re su pro pia s uerte, convenci dos n-u raos ". »
de que pri vada y pú blica me n te o s man te ndre mo s e n la ve-
EPíLOG O
jez )' de qu e cada uno de noso t r os, cada vez que encuen-
t re en c ualq u ie r luga r a alg ún pariente de lo s mue r tos, le
Ah! tie nes, Men éxen o . el discurso de Aspasia de Mile te . d
p re s tará su ayuda , En c ua nto a la ci ud ad, vos ot ros mi s,
M EN, - Por Zeus, Sócrates, dic hosa es , según dices, As·
m us s in du da conocéis s u so lic it ud: después de ha be r es,
p;lsia s i es capaz, s iendo m uj e r, de componer se meja n tes
tablecido leyes a favo r de los hijos y de los pad res de los
.hxcur-sos .
249u m uertos en la guerra, cuida de ellos y t iene orden ad o u
lO CL L ISIAS, Ep i/af i o 80.
1) CL TU l /lI lDl!ll, ti 46; L ¡IlM S, Ep i /af io 71.76 , .1 el'. T u cfDlP ES, Il 4 6 .
190 DIÁLOGOS

Soc. - Bie n, s i no me c rees, acom pá ña rne y la o ir ás h


blar en perso na.
MEN. - Muchas veces , Sócrates, me he encont rado CtIIl
As pa s ia y sé lo q ue va le.
soc. - ¿Cómo ? ¿ No la ad mir as y no le agrad eces hu
s u dis c urso ?
MEN. - Muy ag ra decido le quedo. Sócrates, por C!I
~ discurso a ella o a qu ien te lo ha contado. qui enquie ra qu
se a. Y. a demás. le q uedo m uy agradeci do al q ue lo h
p ron u nc iado.
So c. - Está bien . Pe ro no m e delates. s i q u ie res q u
a lgun a otra ve z ta m bién te dé a conocer m uchos y hermo
. sos di scursos polí ticos de ella .. ,
MEN. - Ten con fia nza. no te dela taré. Tú sólo com u
nícamelos .
Soc . - As! será .
E UTI DEMO

.. AIIJ~iól'l . los d is.c:U T$OS de: eeréc ie r p ú blico (d. Cu.nUD. Le • .w..
I1 U ¡... t • ...• P'¡s . 88 y sils.). r n l r c: los que §e in d uy e n las 0"'1\::;01'1" fún..
bree, aun que no parece que a qul el contexto se refiera ex<:/us ivam en ' ,
3l es t3l$ ú lt im3l$. e l . la In troducd ón, n. 12, y n . 24 de l te xto.
INTRODUCCiÓ N

Na tu raleza y contenido del d iálogo

Los designios de la fama parecen haber s ido un tan to


1 1 ocles con el Eutidemo. Sin necesidad de mayores esfuer-
'li S para justi fica r s u inclusión en el corp us platonicu m
po rque sólo muy pocos y. entre ellos, el infatigab le Van
" lil se at re vieron en el sig lo pasado a duda r d e su
«ute nríctdad-c. ha co ns ervado desde la tardía antigüedad
UII pla ce ntero y cas i inofensivo lu ga r junto a otras obras
1cconoci das co mo superiores. ta les co mo e l Pro tdgoras.
e l Gorgias y el Menón. A exc e pción de un filósofo ep icú-
l eo, Colo tes de Lá mps ac o, que, all á por el sig lo III a. C.,
pert u rbó la t ranq uilidad del diá logo atacándo lo en un es-
n ito, ha gozado s iem pre éste de un a re la tiva indife ren-
d a por parte de crf t tcos y lectores de tod os los tiempos.
Pero lo cu rioso de tal destino radica en qu e, s i b ien no
hay obra a lg una de Platón fren te a la cu al resu lte pos ible
permanec er in difere nte, es el Eu tid em o uno de aquel los
diá logos más inquietos y mordaces, que encierra un a ve-
hem encia qu e hasta puede calific arse, po r momentos, de
volcá nica.
Su t actura. como su propósi to, no gua rdan sec retos.
Son cas i simples y manifiestos. El diálogo se a bre y cíe-
ITa con una conver sación de Cr itón con Só crates. En el
medio, como si estuv iese cuida dosamente deposit ad o den -
1>1, _ 13
194 Dl ALOGOS E IITl DEMO 195

t ro de una cápsu la para contene r su e s ta ll ido. figu re 'h" I o t ra rse de mas ia do caric a t urescos y q ue s us argucias,
núcleo del d iá logo: el r e lato q ue Sóc rates hace de la s dI 'lt una s de d udoso sa bo r, res ultan, so bre tod o haci a e l fí-
eu sio nes mant enida s el día an ter ior con dos re nombrad u,1I ¡k la obra, de un ca lib r e exce sivo. Es ci e r to , ta m bi é n .
so fist a s e xt ranjeros - Eut idem o y Dion isodoro-, en Iv ¡l l lt" parecen un tanto e sque m á t icas la s transfo rm a cio nes
reci ntos del Liceo. En el ves tua rio , pa ra se r má s prc cb ue I jlH' ~ l' o pe ran e n Clin ias y e n Cte si po , por o b ra de ~ a s ex -
E l es ce na r io. pue s, no es otro que el de l Lis is. Y Cr ltón luutuc ic nes so crá tica s y la s refutaciones sofistica s re spec-
que había es ta do 3tH presente, no log ró e sc uch a rl a s. uvnmcnte . Pe ro no puede nega r se la ha b ilid a d del a r u ñ-
El p ro pósito decl a rado del d iá logo lo pu ne Pla t ón "" \ ,,' " u el c uidado a r ma do de la s sec ue nc ia s y e n la dest re-
rías veces en boca de Sócrates a lo largo de la ob ra: pc r In , 11' a r ticula r en u n todo d inámico pensam ie nto y acción .
suad ir a l joven Clin ia s -el nie to de Alcibí ad cs el viejo Porque, natu ralmente, no se t r a t a só lo de enfrenta-
que s e encont raba con ellos e n el luga r. de qu e es ne CCIIIl nuemos de per so naje s, Ellos so n. en e l fondo, mé to dos que
r-io filosofa r -c-ejercltarse e n el saber-e- y ocupa rse de I .. ' o po ne n y luc han: el de la refu ta ció n e r ís tica, po r un l ~ ­
vir tud (arel!). Lo que persigue fu nda me nta lm e nte es e xhl d.., Vel de la d ia léct ica soc rá tica , po r el o t ro . Ambos di -
bir cómo lo a lca nzan los ext ranj eros, de q ué m ed ios se Vil " "1 ~' 1I de la s t écn ica s re tó r icas y e xigen una s umisió n a l
len ell os, cu ya celebridad era grand e po r la efi ca c ia y ru " I"I'l'lcio o r de na do de la p re gunta y la r espues ta ; pe ro a m-
pide z de s u en se ña nza , y s i, en ve rdad lo lo g ra n, o no. h" lo se opo nen, en c ua nto a sus pr et en s iones y a lo s o bje-
La na rración se sucede e n dos se ries de sec ue nci a s n ' Il v lOS busca dos , Mien t ra s u no se jac ta de pode r e nseña r
cut-re ntes, há bilmen te en tr e lazadas y co n u n r itmo gm 1" virt ud e n e l m e no r tie m po, a t ra v és de un a s u pe r fici a l
d ua l de c rec iente te nsión, Ent re los tre s e nsa yos q ue pr ac ,ons istencia ve rba l q ue se va le del recur so de la pregu n-
t ica n lo s sofistas pon iendo de m a n ifies to los mecanismos t" . sin más que u na a lternat iva e n la r es pues ta , el ot ro ca-
de su enseñanza, se inte r ca la n dos exho r tac iones a l filo- " T e de urge nci a s , e s capaz de de s lizarse por en cima de
sofar, esgr im idas con modesta ironía por Sóc r at e s, pero 1" .. ine vit ab le s eq uívocos co n q ue e l uso r evis te a las pa-
c on s ing ular fu erza de c o nv icc ión, pa ra hace r e vid e nte la labrus -ca pa z de t rascende r el me ro pl a no lingüís tico- ,
d ife re nci a de proced im iento s. Ma s la inte nción d e Pla tón Vace ptar la s moda lida des ine vit ab les de la s res p u es t a ~ .
no es só lo és a: es la d e mos tra r , ta m bi én , a tra vé s de los L I manera que Pl a tón e nc ont ró para e nfre ntar e sos m e-
ocas io nal es int e rl ocu to r es - el a p ues to Clinia s y el fogo- lodos que a l inexpe rto po d ían pa re cer afine s por su for-
so Ctcsi po->, los re su lta dos que pueden alc anzarse po r ca ' tnu ex te rio r , a l inexpe rt o ilus t r ad o que pr eju iciosamen te
da u na de la s dos vías. recha za co n m a yo r vio lencia a u no y co nt em pla con algún
Lo s rec u r so s q ue de spliega Pla tó n e n la o b ra so n, co- de je de d is p licente re si gnación al o t ro -cosa que ha ce e l
mo hien han d ich o a lgunos e s tud iosos , ef ect iva me nte te a- anóni mo perso naje qu e a parece a l fi nal- , fue el de lns u-
trale s, los personaje s poseen conto rnos psi co ló gicos ac a- Hartes vida en un cu erpo.
bados y la s escena s una vitalidad m uchas vec es not able , Asl es, pue s, co m o se e nfren ta n. El p ropósito pe rs egu í-
Éso s ha n s ido, qu izá , los principa les fact o r e s pa ra s u be s- ,jo podrá pa rece r el m ismo, pero no lo e s . Uno a pe la rá a
ti m a r e l a lcance es pec ula ti vo del di á lo go, r ed uci é nd o lo, la fero z co nt iend e del panc rac io (v. n, 9), y su me ta no se '
en su maestría , a una s im p le pieza de com edia con ribe- t Ú o t r a q ue la de d er r ib ar a l a d versa r io; e l otro pref e r irá
te s a r tstofa ne scos . Es cierto q ue los dos sofist a s llegan a IIl1a bú squeda conjun ta , un a sue rt e de caza que exige per-
1'6 Dl ALO GO S EU TID E. M O 197

se ve ra ncia co mo a u xil io e n el ac ec ho. La erís tica no hL¡ I a sec ue nci a de los relatos de los d iá logo s co n lo s so-
car á más q u e el t ri u n fo ve r b a l; la d ial éctica soc rá tic u, I II I>I ~ no e xh ibe otro pro greso que e l del mayor nú me ro
ca mb io. inte nta rá alcanzar un conoci mie nto: ese cono, I ,1 Ldacia s a la s qu e recu rren los vanidosos sofista s e n s u
m ien to, preci sa me n te, «e n el qu e es len reuni dos. a la v 11 1 ti de t riunfa r e n las discu siones. Boni tz y Giffor d ha n
ta nto el pro d ucir como el sa be r usa r eso que se produc 11I11III,' rado veint iuna , de las c ua les el te rce r mom en to con-
(289 b). I I" /H ' al go menos de la mit ad. No se t rata, en todos los ca -
Ambos mé todo s son recí proc amen te excl uy e ntes. PI u. , de meras argucias verba les, las hay que encierra n im-
Ión ha o ptado por el segundo . El diá logo cons ti tuye 1 porumtes y difíciles proble ma s filo sófi cos: la na t uraleza
p r ue ba más acaba da. El p rimero es a r t ificioso y es téril 11.1 _cs_ pred ica ti vo (283d , 284c), la confu sión del s ign ifi-
destruye al adversario, pero se des t ru ye ta m bié n a si mi • IlI to rd a t ivo con el a bsoluto (293c , 29Se), la qu e concl u-
mo (v. n. 63). Su res u ltado es nu lo. Qu ien lo asume c" l t en la im pos ibilidad de co ntradecir (28Se), las qu e se re-
conde na do a u na ronda de repeticiones inaca bab les. El lo In. tona n con el principio lógico de no contradicción (298c),
gu ndo. sencillo y grávido, of rece por lo me nos , conecten lo ,
tem en te asum ido. la po sibilidad de u na vía: eve tras cJl . Preci samente, la luc idez que m uestra Plat ón e n la ex-
ardorosamen te y pon te a ejercitarla, como dice el prever I'I' '1 k ión de las fala cias, y en la natura leza de las c ues t io-
bio, ' t ú y con tigo t us hij os' » (307c). 1,,' Ji invo lu cradas, ha llevado a algunos au tores - como rh.

1.00upcn en el siglo p asado el. M. Crombie en el pre-


. I'nlc- a sos tene r. por la vinculación qu e tie nen con te-
2. Est ructu ra del dialo go H I4l ~ filo sóficos má s exte nsa me nte desa r ro llados e n Tee-
l a o bra presen ta con toda nit idez diversos meme ntos Ir lo y Sofista, una datación post e rio r de la fecha de como
o secciones que pueden dispon erse de la siguien te manera: !,u..tel ón del diá logo,
l'o r o rro lado, la na turaleza y el número de las fa lacias
l. PRóux;o(17 1i1·27X )
"l11 plcadas, ha n vi nc ulado ya desde la a nt igüedad a este
Dial ogo in ici al ent re CRnoN)' SOU" 'ES.
dt élogc con las Refu taciones sofística s de Ari stó teles, do n-
11. DU ""ROLLO(275c ·304 b)
l . Rela lo del pri me r d iálo go co n los so l ist a s (175 c.1 77c)-
di' m uchas de ellas aparecen a na lizadas. En ve rdad , co-
1110 d ice G. Ryle , Pla tón t ra ta d ramá ticamente e n e l Huü-
I nte rloc utore s: Eu r ll>u,o . DIONISOOORO. CI.lNI"S y SOcRATES.
l . Rela to de la prime ra u ho rtación soc ni l ica (277d .282e). 011'1110 lo que, después, Ar istó tele s exa mina cien tífica me nte
In le rl oc u to re s: CI.lNI"S y SOCRA 1"E.S. .' 11 sus Re fu taciones. Y es t a n lla ma ti va la relaci ón e ntre
3. Rel a lo d el seg u nd o d ialogo con lo s so fistas (283a .288d). 1I111has ob ra s e n este aspec to, q ue has ta un au tor del s iglo
In te r lo cu to res : DION ISOOORO, SÓCRATES, C' !;SIP<). EUJlr> !;MO. plisa do - Ka rl l ü ddec ke- lleg ó a soste ner - negando, ce-
4. kcluto d e la seg un da ex hortación socrá lica (288 d.2 90e). 1110 Von Ast, au t enticidad a l di ál ogo- que el Eutidemo no
In le rloc ut ores: CI.IN I"S y Só(:MAHS ,
r-rn más que una com pilación rea lizada po r un aristot éli -
S. Diál ogo centra l e ntr e CRITÓ N y SÓC RH ES (2901.'.29 301).
\l . de los ejemp los que a pa recen en las Re fu tacio nes so-
6. Relato de l lereer diá logo co n los . " lis la s (293b-304b).
In te r locUlo r e s: EU' IDE MO, SÓC RATt;S. DroNISODORO y Cr esreo.
itsticas. Con lo cua l quiso , seguramen te, tirar por ti e r ra
11 1. ErfLOGO(3041'·3071.') 1" ap reciaci ón famosa de V. Cousin : «l'ouvrage d'Ar ist ot c
Diá lo go fi nal ..nt rc e RITÓN y SOl·R"TES.
19 8 DIÁLOGOS HI T ID EM O

intitule De la Reiu tation des sop hismes n'es t pa s a utre eh\ 1. 11< .. ellicio n cnuce de M. $(: HA NZ . P/alonis EUIIl.vdel1ws, Wün. bu rgo.
se q ue l'Eu lhydh tlC réd ui t en fo r m ule s ge nerales », IUl , ""lI lO la s pos h,riores y e xce le n tes ediciones cr tuc as de E, 11 . {;[ t'·
La sec uen ci a de los dos prorr éprlc os socrá ticos 0 1'1"1'- o"" ll , ¡ h e f.u lh yden ... s 01Pla lo, Ox lc rd . 190 5 {hay reim p le s ión l,k 1'J73¡.
I I Mf l lDIER. ,m P//lIO I1. Oeu"~e5 comp/é u s, vol. 5, l.. parle. Parb . 1',1) 1-
ce, e n cam bi o. un sosten id o progreso. En e l prim e ro. par
'11' uh lil auo, a s im ismo. el te xto y co men ta rio d e G. A"''''EIoI DO LA. /'/<llOlle,
t iendo de la pre m isa de q ue lod os los hom b res q u ieren se l
I II/tdm lo. Milá n , 19 36 (ha y re imp re s ión 0.1... 19 57). Y el a rlk u lD d e G. J .
di c ho sos o fe lic e s. se llega a a d mitir. de co m ún acue rdo
lO' \'~ I ~. S, . Note s on so rne pa s.sages in the t:u llIyJe m IU" en A,f.. emos)' " ..
q ue el m ed io pa ra e llo so n los b ie nes, y que no bas ta só lo i\ (1"72 ). 42·55 .
c o n poseerlos. s ino que hace fa lta sa be r usarlos. En co n ~'" he apart ado en va rias oca s iones. casi si..rnpre sob re la ba se de esos
se c uenci a. sólo la posesión de un conoc im iento perm ite " ~ h ,, .. ,s y de a lgunos vi ru s, del tex to li jad o po r Bu m et . A fi n de q ue el
s u buc n u so. En el segundo protrépt ico se inda ga en ron- I • lo .. inte re sa do p ued.. conocer es a s dí te re nc tas . l igura a e...n li n ua,·ió n
ce s ace rca de la natura leza del co noci mi e nto q ue e s necc- " "" lahla d e d ive rge nc ias co n ind icación del N ilor O e s tu djcsc c u ya 1...e-
s a r io pose er para log rar e se buen uso, pero la d ificu lta d I Ul ~ ,.., sigue.

del as unto no permite e stablecerlo con a lguna preci sión ú ctura seguid/l
I h' t'/ls Lectura de Burnet
El valor, sin em bargo, de estos pr o t r épticos soc r áricoe
no es capó, na tu ralmente. a los ojos de los antiguos, y J érn- l1IJl-J h:Cll Iió:xn, ñ 'Ilávt:c,w Ii&:xn 'Ilá Vt Col V lCpau iv. SouNl.
l crn Il;p auIvl
b lico - t ine s del s iglo III y co m ienzos del IV- los ma neja
11.k 6 (OOCl ) sin atetízer, GlfRlRD.
y t r an scribe res u mi damen te en su obr a den ominada pre- sin aterízar, G IFFORU.
l1k7 ( bl bcnttiov]
c isamente Protréprico [v . n . 40 y. también, la s línea s m d5 .~ t i , GnrotlO.
293a 5-6, transc ri ta s por Jámblico en 27 , 9· 10). 114;¡S n~tO v] sin ateüear, ew."TIl~ IS~ .
m b4 btot&dpn l'uoq>6aPft, WEUS.
116<'3 ta!Ji v ú¡.tIv . SULI.8AUM.
3. Acci ón dramat ica y u bicación del di álogo
Casi lodos los autores c o inc ide n en que la a cción t ra ns o ro.,
lnll Ó

118a7
d po: ou (oü)
ll; o:to:~;\CW
,~
lipa oú . con i. ( Y. n . 31).
lIatafkx').wv . A...U.U: NOOI.A.
h:1 tY. MtR1 Ulf.R.
c urre en t re el 4 15 Y el 404 a. C. No e s tá n, s in emba rgo.
278<6 bt, !JOl floll;El , bt ¡.tO l bOKE i , G tfR)HU.
de ac ue rdo ac e rca de la u bi cació n re la tiva con r es pe cto
280a 7 Tl oo:~o: t I , o a", {g , S Cll' NL
de los o tros d iá lo gos q ue Pla tó n e sc ribió e n e l pe r iod o qu e
se s ue le den om ina r de t rans ición (388-385); pe ro es indu- "'''14 oU' l!.EIv . STAUB~U M .

dable, co mo ta mbién lo co nfir m an lo s rec ie nte s e s tudios ''''''.


2111b8
~
vo;:;.. l X(olv
Qc;. ST"'-.UI~UU .
( voüv ~ x(.l V J. B AIlHAU • .
de Leona rd Br a nd wood ( The Dat íng o f Pla to 's Wo rks by 2112L'4 ~ yó:p v...EYCW {w,} Wo 1lEp l)'E: Yov. SoIANl.
stvlistic Metlrod, Lo n d re s. 19 58), q ue se halla ju nto a l Me- 283c8 lOTlv bi. flv o ' ( y e::. , l o n bi OÓK ó:ka!;<'w , M ~R tnllll
mú, y a l Gorgia s. oOK á}l.o!;¿;;v
2Mb6 tK Eiva bd vo\ . DE VRIES.
2lI5eS dKOÚ(olv ••• á'ltOÓdKW- Ó KOÓ(.l • •• [ á 'llOOE(KVU fl \ ] . JJAu-
NOTA SO BRE EL TEXTO IIAM y WrLAMOWI Tl.

He seg uid o, en ge ne ra l, 1" e d ició n de J. BI!!'NETe n PlalOnis Opu a, vol.


' 2l!6cS_8 "' v. n . 64.
toút <¡> y' olÍ •• • x pfto'ea\ ". HAn-
287c3
lIJ , Oxlu rd , l'J03 (rcimpre ~ ión , I 'J57). per o Icn ie nd o a la visl a ta n to la an - HAM.

11
200 OIÁLOG OS

Lllleas Lectura de Bumer Lectura seguida


28%7 6l:iv bn vol>c; . Mé{lDlm
"3<13 'lIa Tayd l; 'Ilá vw: MYH <;. GIFFORD.
29408 [ -rov Eó6ó6 "'lIov ] sin a te tjzar , AMMENDOU.
298a8-9 ( 0 61( 4 v ] sin et erízer, Grl''folm.

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298d.
299d4

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K~ I C)V
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Kpá Tuno l
J3cll bl LW . MOODIER.
XPl'¡ll,(lTO . AMMENDJIA.
[,.6 oocp6v I ,
K p a1:((I"'[ Ol C:;,
MáuDIER.
MlóRroIER.
EUTI DEMO

305<S 6 VT~ 06T(o)(; . WlLUlOWIlZ.

C IU TÓN, SÓC RATE S


Enrre las trad ucciones a o tros id iomas q ue me rec en rne nc jonarse, ti
guran la de R. Kl '" S,,,.....v e , Piara, EUlh)'dem t< s, lndianapc lis. 196 5, 'J
la u~· A. ZErr l T UTT A, PÚllo ne, ,",,¡iduno, F lo renc ia , 1% 9. C IUTÓN. - ¿Quién e ra, Sócrates , aque l con quien hable- 27 1a
I"u. a yer en el Liceo 1] Os rodeaba ta nt a gen te, qu e s i
111('11 me acerqué yo pa ra tratar de escuchar, no pude e n-
BIBLIOGRA FíA tender cl a ramente nada. Empiná ndome logré, s in e m-
hur go. ver algo y me pa reció e xtran jero tu int erlocutor,
Ellec lur 'la conoce las im porla n lls imas o bras de W. K. C. Guth rie 'J l Uuié n e ra?
d.. P. Fri e d lacnd ..r, a las Que se ha re m itid o pe rma nent omlen le e n ~ l. SÓC k AT ES . - ¿ Por c uál preguntas, Cr itón ? ¡No habla
e d ición. Cum a ..o e l ca so de l Eulid.mw la bibliog ra lia nu eS nu me ru..a,
uno, s ino qu e eran dos!
ind uyu la J>Ómi na de a que llos lra ba jo s q ue me pa re ce" má s in te re sa n-
C k IT. - El que digo yo estaba sen tado e n el segu ndo
.e s y cum p le'oll .
lugar a tu d e recha. En medio se hall aba el joven hij o 'de b
H. BONll l , Plu /()"isch~ Slu d;~ ", 3,- ed.. Be rli ll, 18Sb. pa~. 9J. 15 1.
K . PIlAElIn u , . Pla to und EII/h}'d~",us •• Ph il% gus ll7 (19 321, 12 1· 135 ( =
K ld ,,~ Seh riluH, Hild r s hci m, 1'l73, pág s. 1....2 S). I El Lk eo e ra un o de 101> lre s más famosos gimnasio s de At~nas, eo.
M . II UU ELUTO.• La pokm íca a n tí·sv li s lica dd l 'Eulid~m o e il suo une- rilO la A ea d~mia y e l Cinosa rges - los o tros dln-. esta ba situad o fue ra
re s....• do tlr ina le . , Riv. e ril. d i S/Qriu della Filoso fia 7 (19 52/, 8 1· 10 3 de los mu ro s de la ciudad. Se hallaba hac ia el Es te. recos ta do so b re la
(a hu ra incl uid a e n L.a relo riea so/i5l ;ea tI~J: li se rill ; di PI" 'oH~, Mi· I. lda su r d el monte Lica be eo, no lejo s de la ma rgen de recha delI hso, e n
1,, 5 al reded o res de u n luga r do nde . p res um ib lemen te. ~.J . t ió a lgun temo
hi n. 1'J531.
1,1" o a lta r d e Apolo Liceo . Sóc ra tes lo f rec ue nta ba habitu alm ent e, ta l
R . K""T S r RA<,llf., I'la IO'S ,, ~~ uf Fal/ut:}'. A S, ,,dy of 11r~ « i:" u ll' yJe "' u~. " " d
,,>11"-' lo indican con cl arid ad los comienzos del Eutifrón (2a l ), d el Lisis
s ,,"'~ othe r dia logu~s, Londre s, 1962.
{203a 1) y el final del Banqu ere (233d8 ). Los gim nas ios no constituian s tm-
L. STII.A IISS, . 0 11 th e ~utl,}'de"'us ., Interpre/ali on 1 (1970), 1·20, plc me nte re c intos pa ra realiza r eje rci cios o ro ma r ba~5 •.si no...qu e eran
H. KhlJI.EN, UtllerSU" hUIlJ: /fl t u Pl"w .u . E u lh}'de"'., Wiesb ad clI, 1971. lugar es de d is tracción y descanso a lo s qu e conc u rJ j án ~ s. val'(O~ ate-
A . J. F f.H IJl; ltRU , L.n troi s oI'ro lrepliqu n . de Puuo n. Eu/hyJem e. I'lieJ"", nicn se lid uran te la larde. Era posible ca mina r e n e 0$8' rav~ s d i:10 s:p6 r.
E p ínomis. Pa rís, 1973. tkos qu e habitualm ente rodeaban a lgunas edíñc pio nes (v., más adel,n·
te, 273a3 y, en 303 b6, la refere ncia a la s co Jum asj, o-b ten se n ta rse ~ II
las exed ras que so lía n hall ar se en los extre mo s ~'.e<t. t ; /1
~'' ' '.
"'"",",,~" dI "
\ J
202 DI ÁLOGO S E U T IDEM O 203

Axíoco ' . a qu ien e nc ont ré . Sóc r a tes . muy de sa rrollado O UT . - No conozco a n in gu no de los dos, Sóc rates. Al
ta n c recido q ue se parece bas ta nte a nues t ro Cr ito hu lo ', 1"lI l'l'cr, se t r at a otra vez de a lg ún nu e vo t ipo de so fis ta .
pe ro él es de mas iado espigado, mientras que ése', eu 1 IlI' dónd e proviene n ? ¿Cuá l es su sa be r? e
camb io. se mostra ba bien pro po rcionado y su a spec to crl'l Soc . _ Ent ie ndo que son originar io s de po r aqul, de
r ea lmen te be llo y d istingu ido. ' . lJu los; se es tablecie ro n, después, co mo colo nos e n
Soc. - Tú te refie re s a Euríde mo -, Criló n. El ot ro, Ili rios · , y ex ilia dos d e ese lug a r, ha ce ya m uc hos años
que estaba se ntado a mi izquie rda . es Dio nisod oro, su '1IIl' andan ro nd a ndo po r est as t ie r ras. En cua nto a lo q ue
herm a no ' . y él también inte rv iene e n la s ccnve r sn- 111 III C pre gu ntas .ace rc a de l s a be r de a mbos... ¡es a lgo
ci one s . ..som broso, Critón! Am bos son lite r a lm ente omniscientes,
~ 111punto que ha st a ese mo mento igno raba ) '0 lo q ue e ra n
1" ,. pancraciastas ' . So n capaces de luchar vali é ndo se de
Se refiere .. Chu las. cuy a presentacíén más po rmenoriz¡¡da ha" lod o tipo de r ecu rsos, pe ro no a la m a ne ra como lo ha-
d e5puk Sóc ra te s en 27S. lo-D4. Por el empleo aqul dell~nnino m ..i riJ.
kiaOl y de "ean(d,;QS (p . e j., en 275a51. 1a edad de Climas debe de oscila r, en
rtun aq ue llos herma no s pancra ci a sta s de Acarnania '",
ese momento, e ntre los <¡ u lo«: y vein te a ño s. Pla tón se ref iere 18m 11tH' ún icamente empleaban el cuerpo; éstos. e n cambio, d
bién , más ade lant e.• los admiradores o enamorados q ue [o a co mp añ an; 11" sólo son habilisimos en vencer a todos 11 en la lu cha
pe ro es hNOfO"fl! q u ie n pone en boc a de Crilobul o, en &m q u ~ u (JV 12), , mpor a l - y en particular. en la que emplea armas tienen .
e l clOllio ma s s ign ifica tivo de la belleza de CJinias.
J Uno de 105 c ua tro hij os de Criló n, y por cu ya ed cc ac jón es lá és te I Colonia aten iense. en cuanto a su llob ~rno, y panhe lén ica . en
s u ma men te p reocupa do Iv. 306<1 y ss.). Al igua l q ue sus hermanos, fue 'l'a n IOa s u com pos ició n. eSlablcc idil a ins ta nci a s de Pe ric les e n Milllna
. d isd p u lo _ d e S6crales, seg ún in d ica D.óGE NES L\.f.ROO (II 121). Pl, tón , I.. ....' ;a. mu y ce rca de Síbari s , h aci a 44413. Hipód a mo de Mik to diseñó
qu e suele men tíonar lo en va ri a s ocasion es ¡p. ej., Apología 33d 9, Fedlm . u plan la y Prol á go ra s s e ocupó d e sus I(')·es. " erodol o , primero. y Lí ·
59 b7j, lo presen ta siemp re ju n io a Cri tOO y s io a lud ir a los restantes " ... dl"spues, pa l1ici pa ro n en la co lonización. Fu e centro im po r1a n lls i·
herma nos. ,,,.. de irra d iación cul t u ral, pero los obs li cu lo s mayo re s " su de fini li1la
~ E l in d ica do e n p rimer té rm ino es Crtto bulo. a q u ien se men c iona .r ilndl"za fueron la he lerogene ida d de la población _que provocó drver-
só lo incide n ta lme nl e; e l o tro, a lU p resente es , po r s up uesto, C!ini as. •.. revueltas- y sus lu ch a s co n la s ci u da des vecinas . cr. v . EnaENBElI:G,
S Pa ra la ex presión griega, v. no ta 52 de la p;'lg. 552 d el primer .lhe Fo uJUialion of Th u rj !», Am e rie<rn }owrmll of Ph l /o logy 6911 948),
vol umen. 1 ~ '1. t70 ( = Po/is und ' ;;lpe rium , Zu rich , 1965-1, pags. 298 y s igs.). el., ta mo
6 P la tó n me nci on a a d ife re n tes EUlid emo s e n su s d iálogos. E l pero hitn, N. S ANTOf> y ANGUA,.M. P'CAZO. L tl co!onlztlció rr g ri egll. Mad rid , 1980,
so naj e de es ta ob ra sólo a parece nomb rado, en ca mb io, en C t"tÍ rílo (386d3) pllIlS. t7 2·3 y 329, con las ref erencias b ib liog rificas a lti ind icad as.
y ace rc a de la le s is qu e a llí sOSliene , V., má s ade la n te, n. 99. El Eut ide mo , El p roce der de lo s ea ara njeros, cuyo sa be r p~cisa má s a delante
del comienzo de R ~púb/ü:Q (328b5), h ijo d el a nci an o y a cauda la do a fa. denominand e lc - e r ts uce -, lo a sim ila Pla t ón, de spect ivamente, a u n lipo
lo, así co mo el de l fina l de Brm qu ele (222b 2), h ijo de Oiocles , n ada ticnen b rulal d e co mba te gtmrnco, e l p anc rac io, q ue era un a co mb inac ión d e
q ue ve r co n n ues tro per so n aje . Ta m poco d ebe ccn fun dt rselo c on el in. l>lIgilato y lucha en e l qu e tod a c la se d e go lpes estaban permi tidos, y donde
ler locu tor de Sócrates en lo s Recue rde>~ de JENOFONTE (IV 2, 1-40 Y paso lu ¡m ico qu e se prohib ia e ra hu nd ir los d ed os en la na ri z o en lo s ojo s
~ im). un joven de aproxim ad a men te dieci ocho anos y s ing u lar eje mp lo .Id adversa r io. R. ROBINSON seña la que a sí co mo es en Plat ón ela aproo
d e . b ib liófilo. de la época. llilUJa ima ge n pa ra la di a léctica el ca mino o la b ú squ ed a , lo es para la
7 Apar le de las sim ples menc ione s de ATEN I'. O(IX S06b}y SEXTO EM' cr tstic a la luc ha . (P/¡;¡ to 's E¡;¡rlier Di"leclíc, 2." ed ., Oxfo rd, 1962, pág. 8S).
rfll.Jco (VJI 13 y 64), el único a u to r.q ue alude a u n Díontsodcro qu e p a rece 'o Reg ión situ ad a a l noroes te de Gr eci a, fr enl e a la isla d e Léu ced e.
ser es te mis mo h er mano mayor Iv., más ad e lan te, 283aS) d e Eut ide mo Nada se s ab l" ace rca de eSlOS herman os qu e mend o n a Sócrales.
e s J I'. NO.-D NTf. (R terurdo~ de S ócrates 111 1, JJ. AJli lo presenta co mo un " Ju ego d e pal ab ra s in traducib le ent re «vence r a to dos. (pál1/U"
«m ae stre de e stra legia . llega do a Atena s. hatti,,) y pan cr acio (p¡;¡"krátion ).
204 DIÁLOGOS EUTIDEMO 205

por cierto. sing u la r maestrí a y so n capaces de ad ies trur mayores pa ra que a s istan a las lecci ones de citara, como
272tJ b ien a c ua lq u ie ra q ue le s pa gue- , s ino q u e , ta m b ié n, sun \lltld isclpulos míos, int en ta ré t a m b ién pe rs uad ír a otras
los má s a trevidos e n afron ta r la s di spu ta s ju r-ídicas y en pura qu e hagan lo mismo aq uí conm igo. Y t ú tamb ién, a d
e nseñar a los demás a expone r y com poner disc ursos adc IlI up ós ito ... ¿ por qué no vienes ? Tu s hijos nos se virl an de
cuados para lo s tri bu nales. Ant es e ra n, en ef ec to, sólo C )I. , ,·ho. Deseosos de tene rlos a ello s como d iscípulos, es toy
per' tos en esas co sa s, pero e n la ac t ualidad han llevado 11 ,,'~ uro de que ta m bién a nosotros nos han de dar
su perfección el a rte del pan c raci o. El único tipo de lu lecc ione s.
cha que ha bía n dejado sin ejerci tar lo ha n prac t icado aho- CRIT. _ S i as í te parece, Sóc rates, no hay nin gú n incoo-
ra ta n a fon do qu e n adie se a trevería a enfre nta rse con vi-nicnte. Pero e xplí came. p r ímero, en qué consiste el sao
ellos: ¡tan di est ros se ha n vuelto en luchar con pala bras lu-r' de esos hom bres. para que sepa yo lo que he mos de
y en refu t ar cua lquie r cosa que se d iga. fal sa o verdade- ap render.
b ra! AsI, pues, Cri t ón, t en go yo tod a la int ención de e ncu - Soc. - Lo oirás e n seguid a, porque mal pod r ía de ci r-
menda rme a estos dos hom bres, ya que b ien di ce n ellos 11', e n efec to, que no les pre st é a te nción. Preci same nt e, no
que pu eden en poco ti e mpo hace r d ies tro a cu alquie ra en _ólo es tu ve m u y atento, sino que recue rdo b ien lo suc edi-
sem ejan tes lide s. du e in t en ta ré rel at arte tod o desde el comien zo,
CRIT. - ¡Qué ocurre ncia, Sóc ra tes! ¿ No temes se r a tu Fue obra de a lgú n dios que estu vies e po r casualidad e
edad ya bastante mayor ? sen tado a llí donde me viste. e n el vestua r io del gimna sio.
Soc. - En Jo má s mín imo , Crtt ón. Tengo, además, un a com ple ta me n te solo y pe nsand o ya e n irme. He aqui que
prue ba su fic iente y has ta un moti vo de aliento como pa- ( liand o me d isponía a hace rl o, apareció la consabid a se -
ra no te me r nada: esos m ismo s dos homb res eran viejos na l dem 6n ica IJ. Me vo lví en to nces a sent ar y poco des-
- d igámoslo así- c ua ndo co menzaron a dedicarse a es te
IJ La ellpresión .Ia co nsabid a seiJaI dern ómca», con la que se al ud e
e sa be r que yo quie ro a lcanzar. la e rlstica. E l año pa sado,
• lo q ue corrien te me n te se ha de nom ina do e l . gen io., .daimon. o .de-
o el a nte rio r, no e ran todavía e xpertos. Me inquie ta , s in mun io. soc rát ico, es co incid en te con la q ue a pa rece e n Fedro (242b9) y
emba r go, una cosa: no quis ie ra desacredita rl os también rll TbJ.f,ts (129b8). De la co mparación d e lo s pas ajes principales e n lo s
a ell os como al cit a r ist a Cono l/ , hijo de Me t ro bio, qu ien 'llle Pla tó n a lude ellpllcit llmen te ala c uest ión (A p% g(a 31c.7 ·db y 4Oa2-o:3,
me ense ña. a ún hoy, a tocar la cíta ra. Mis co ndisci p ulos ' ,u /i/ rón 3b5-6, Rep úblicli 496c.3·5, Teeteto 151a3-5, Akib lades 10 34·6) pue-
,le des prend" rs " , 1}q ue Sót:rate s rec o noce e n s tla p resencia d e a lgo q ue
- que son jóvenes- se bu rl a n de m¡ c uan do me ve n y lla- n ita nombrar en fo rma sus tan tiva y pref ie re, en cam bio, ca lifica r co mo
man a Cono «maes tro de viej os ", Por eso me p reocupa qu e divino (Iheion) o d emónic o (dQ;mónio nt 2) q ue se meja n te . algo . ac túa
apa rezca a lgu ien mo teja ndo de la mi sma ma nera a esos (omo un a se ña l que sue le ma n ifes ta rse a la ma ne ra d e u na voz. pe ro no
do s extra njeros. Te me ro so s, t al vez, de que les p ueda su- !lsica. s ino ú n icamenle a ud ible para el -otdc del a lmao; JI q ue esa voz
k es fami liar; 41 que apa rece imprevisible y súbitamen te: 5) q ue tiene ca-
ceder eso, no e staria n qu izás dispuestos a acep ta rme. Pe-
rk ler trnpe ra livo; 6) que n unca es arbit...ria (al obedecerla. Sóc rates ad-
ro yo, Crít ón. as í como logré pe rsuadir a otras pe rsonas vie rt e lo lun dado y va lioso de s u a pa rición); 7) q ue se ma nifies ta e n lodo
ti po de ci rcu nstanci as , im po rt antes (su no inge re ncia ac tiva en po lltica)
11 Figu ra O5Cura. a l parece r ya rid icu lizada e n la com ed ia po r Fr j· como tr iviales (es le encuen tro con los elltranje ros); 8) qu e SOC...tes le preso
me o y po r Am ips ias. A ~I a lude ta mb ién Sócrales co mo mae stro d e m us t- 111 tanto o mayor cuidado qu e a los s ueños y a los o rác ulos. Lejo s, pues,
ca en Menh eno 235e9. Más ade lant e lo vuel ve a mencion ar en es te dlá lo- ,le ser la voz de la conci enci a moral, e l tes ttmon ic de un d io s pa rticu lar ,
go, e n 295d3. " u na fo rma inte rio r y person al que podta reve s tir pa ra él la Providen-
20ó DIÁLOGO S ElITlOf.MO 207

2730 pu és ent raron es tos dos, Eu tide mo y Dionisodoro . y 0 1111 t tu jun te a mí, a la izqu ie rda. y e l resto, en fin, se ac ornó-
má s ju n to a e llo s, s us d iscíp ulos. que me pa recie ro n pu Ilnha donde pod ía .
c ie r to nu me rosos. Una vez a llí se pu sie r on a cam ina r 11 I Sa ludé efu s iva m cn tc a a mbos, pu esto qu e hael a t ie m- e
la rgo de la p ista. No habían aún da do dos o t r es vucl uu I IU 'lile no los veía , y diri gién do me en seg uid a a Clin ias ,

c ua ndo llegó Clinias, de qu ien acabas de decir, con razón, h- d i]e:


que es tá muy de sa rrollado: d etr ás de él venía n m uc ho - Es tos dos hombres. Clin ia s, que es tá n a q uí - Eu-
de sus e nam o ra dos ,. y e ntre e llos Ctesipo " , un jo ven lltt udemo y Dionisodoro-c-, son pe r so na s doc ta s qu e no
Peani a " , de po r te bas ta nte be llo y d isting ui do . a u nque l l' ul..'upan de ins ig nificanci as s ino de asun tos im po r ta n-

b pet ul a n te en r a zó n de su juven tud. Al ver Cli n ia s dcsd, " ' lo: conocen to do aq ue llo concernie nte a la guerra y q ue
la ent rada que estaba yo sentado solo, avanzó directamcu tll·be sa be r q uie n aspi r e a convertirse en est r a tego - es
te ha c ia mí y se u bi có a mi derec ha. j ustamente co mo tu ,kd r, la táct ica, la conducción de los ejércitos y el adies-
dices 11. Cuando Dionisodoro y Eu t ide m o vie ro n lo q UI' n umie nto necesa rio pa ra lu cha r co n las a rmas- oAde más.
hacía Clin ias. se de t uviero n p ri m e ro ha bla ndo e nt re sl,.y l lll1 también capaces de lo gra r q ue uno se pa def en de r se

nos mira ron un a y o t r a vez -yo no deja ba de p r estarles , '11 los trib un a les , s i llega e ven tua lm e nte a se r víctima de
alen ción- ; se ac e r caron, des pu és, y uno de e llos , Eu tide- .ugune inj us t icia ,
m o, se se ntó a l la do del jo ven, m ien t ras que el ot r o lo ha- Mis pa la b ra s produj eron en el los , sin em ba rgo, una d
suerte de desp rec ia tiva co nm iserac ión; se pu s ie ron am-
d a , no e s s ino la co nsta tación h uman a de la p res e ncia de u n tra sfon do
suprah umano, ta n d ivino como in so nd able, y a l cu al to do ve rda dero 11
bm. inm ed ia ta mente a reír, mi r á ndos e e nt re s í, y Eutide-
lósc fc. co mo Sócra tes , debe se r capaz de ab rir se, cual s i rewnoc iera que mo dijo:
su en~ñanza ~s i parfauement ra tio n ne l, es t su spendu .lo qu elque chose' - No nos dedi ca mo s ya, Sóc ra tes , a esas c ues tio nes,
qui se mb le d épasser la pu re raison . IH , BUGMlN , ús deux JO U f a S d. l lll o qu e las a te ndemos como pas a tiempos.
la mOf a le el de la n/igiolt, J J .• ed., P:;1J1s. 19<11 , ~g. 60). Por ú himo. den.
Admi ra do, r epu se:
tro de l co n texto de nue s tro d iAlogo, co nviene tener presente la q ue se ña-
la bi en P . F~ I EDI.AE.N Df. R: . 1.0 de mó nico ell Sócrates - d ice- de te rm ina - Algo not able ha b rá de se r vu es t ra ocupa ció n , s i su-
p rima riamente su mi s ió n eJ u~·a t i va. No se tra ta simp lemen te de una no- u-de q ue semejantes tareas no so n aho ra par a vos o t ros
tab le peculiari da d pro pia de una dete rm inada persona , sin o de a lgo qu e más qu e l ID pasat iempo, En nombre de los dioses, ha ced .
es parle int e gral de un gra n m ae st ro , En ta nt o que infl uen cia extraló gl. pues, el fa vor de deci r m e c uá l es es a maravilla.
ca , aseS u ra que la edu cución se de sarroll e en el ámbi to d e l lógos y no
se co n\'icrla en un ejerc ido pura ment e ra ciona l, hacie ndo pos ible a sí una
- l a virtu d ", Sóc ra tes -ccor uestó-c no sotros no s
co nex ión co n ese e lemen to de mis te rio qu e es tá au sente de la e nseila nu constde ra m os capaces de ense ñarla mejor y m ás rá pid a-
suf" lica. De manera q ue Pla tó n lo ha co ns ide ra do como a lgo que (arma urente q ue nad ie .
pa rt e de lo normal, no co mo a lgo an o rmaL . (PlIllo>l, vol . 1. 2.· ed., Be r. - ¡Oh Zeus - e xcl a mé-, qu é es tá is d iciendo! ¿ Có mo !!
lin , 19S4, pág . Ja ). habéis logrado ese prodigio ? Yo os co nside r aba ha sta es-
l. v éa se n. I de la pág . S02 d el vo l. 1.
15 Es. ~iblemen te, a lgo mayo r que e lin ia s y tambitn p ri mo de Me-
re momen to, co mo acabo de decirlo, afamados expe rtos
ne xe ec. Apa rece en l.isis t20Ja y 206d-e¡ Yestá presen te en la mu erte d e 1' " la luc ha a r mada, y así ha b laba de vos ot ro s. Recuerdo

Sócra te s (Fedó" 59b9 /, q ue c ua ndo no s vis itasteis la vez a nt e rior ha cíai s p rofe-
,. Demo d el Átka, ub icad o a l e ste de Atena s y a l qu e pe rte necí a tamo
b ién De mó sten es.
11 er.27 1b l. 13 Véa se n. 25 de la pág. 522 del vo l. l .

-,
208 m ÁlOGOS EUTI DEMO 209

s ión de e llo. Ma s si en r eali da d poseé is aho ra es te c OIlUl I r e q ue ell o le impedía vedo. de m odo qu e para contem - e
m iento, sedme e n l o nces prop icios ,. -y advert id q u e m plnr a su amado y a ns io so tambié n por' es c ucha r , d io Cte -
2740:1 d ir ijo a voso t ros e xa c ta me nte como s i fuese is d ioses , im _ipo un brinco ha cia adela nte y fu e e l p rimero e n co locarse
p la cando perdón po r m is e xpr es io nes a n teriore s-o I'ur direct ament e fre nte a nosot ros. S u ac t itud de terminó q ue
c ie r to, Eu tidem o y Díon ísc do ro. asegu ra os bien de que dlio ta mbi én los dem á s, ta n lo los enamora do s de Chula s co-
c ts ve r dad. Es ta l la m a gnitud de v ue s tr a e m pre sa que ~'1I mo los segu ido res de Eu tidemo y Dio nisod o ro, se no s u bio
na da pued e a som br ar el hec ho de que uno desco nftc. ruran alrede dor. y és t os eran preci sa m ente los que yo se -
- Ten po r seg u ro , Sócrat es - d ije r on a m bo s-, q ue In nulaba cuando le decía a Eu ti de mo que e s ta ba n e llo s di s-
cos a es as!. pu estos a apren de r , Cte sipo a sintió m uy entu sia smado d
- Pue s e nt o nces yo o s fe lic ito por esa adq u isició n HUI y ns¡ ta m b ién lo h icie ro n los de m á s , y to do s, en fin , a l u ní-
c he má s q ue al Gran Rey pu r s u im perio N . Pe ro co ntcs seno. ro garon a a m bos q ue d ie ran una dem os trac ió n de l
ta d me ta n sólo esto: ¿ Iené is pensado da r una de most ru vale r de ese sa be r.
ció n de se m ejante sa be r o qu é ha béi s deci di do ? - Eut ide m o y Dion isodoro - ind iqué en to nces-, tra-
- He mos ve nido p reci sa me nt e para eso, Sóc rates , con l (ld de no escatimar a bsolu ta m ent e e sfuerzo a lg uno pa ra
b el a nim o de realiza r una de mo s tr a ción y en se ñar, si ¡¡I _lIlisfa ce rl os , y haced una demos tración , con lo que me
guí en qu ie re a pr en de r. com plac e r éis tambien a mí. Evident emente, una que sea
- Os ga ra nt izo que lo han de que rer todos aq ue llos que lo má s co m ple ta posible no es ta rea fá cil : no obs tante, res-
no lo posee n. En pri me r luga r , yo m is mo; de s pués , Clinia , ponded me: ¿ sois ca pa ces de c o nvert ir e n hombre de b ien ~
q ue e s tá a q uí , y, a par te de nosotros , e ste joven Cte sipo unica m en te a l q ue ya es tá conve ncido de q ue necesita
y ta m bié n los de m ás - d ije, se ña lá nd o le los e namorado. «pren de r co n voso tros , o ta mb ién' os a t re véis co n aque l
de Cli n ia s- . Illle a ún no lo es tá , ya porq ue no c re a q ue se me ja nte cue s-
És tos, j ust a me nt e, forma ba n ya un círc u lo e n torno a non - la virtud- sea en ge neral susceptible de ser a pren -
nosotros . Po r qu e hab ía suced ido q ue Ctes ipo a dvirt ió de dida, o bien porqu e pie nse q ue vosotr os do s no so is pre cio
pronto q ue e s ta ba se n tado lejo s d e Clínías, y como Eut l- "lime nte maestros de el la ? Má s aún : a l q ue sost iene e sto
de mo a l habla r co nm igo se incl ina ba ha c ia a de la n te -y úlü mo. ¿ pe r sua d ir le de que la vir tud e s e ns e ña ble y q ue
Clin ias s e ha lla ba e n el m ed io de noso t ros 11_ , me pan' ,on voso tros pod r ía a pre nde rla a la perfecci ó n. e s a s u nto
eh- es ta m is m a di sci plin a o b ien de otra ?
19 Eo; pr es ión usada pa ra roga r a 105 d ioM'S p"rdó n po r a lguna cul- - Pue s de esta m ism a , Sócr a te s -co nt estó Dio ni so-
pa (d . Fed ro 257a6-8). So n frecue nt es las inv<x: ac iones a 105 ut r.njerol, doro.
Ir al á nd o los iró n ic a me n te co mo d ioses . lo la rgo del d i¡\lo SQ. - Po r lo tan to, Dionisodo ro - a gre gué-, ¿ so is en la ac - 2754
1Il Et én fas is q ue pone Sóc ra les e n la virtu d como ad q u b ic ión m61
valiosa q ue la d e lod o el impen o p.eru , t rae a co lación lo qu e dec ta De.
tual ida d lo s má s c a pa ci ta dos pa ra ex ho r tar a los jóve ne s
ji la filoso fía 1J y a la prá c t ica de la virtud ?
móc rito: p re fe l1a «enco ntra r u na sola exphcac jón cau sal q ue lle ga r a ser
a mo del re ino de 105 persas. (f r. 118 DK = 95 1 B. C. G.). - Así lo c ree mos , efectivamente , S óc rates .
21 Ta l co mo a pa rece ind ica do ",n 273b l·8, la dis pos ición en qu e CI·
la ba n sentadu s es la si gu ie nte: Sóc ra tes tenia a s u de re cha a Clin ias, y 11 Tom ad a a q uí en su sign ific ad o edmc lógtco: am or a l sa ber. De la
éste, tambi én a su de rec ha, a Eu tidemo. Dion isudo ro est ab a a la ízq ulc r. ", ¡. ma man e ra a pa rece tamb ién más a de la n te {282d y 288d). Cf. n. 6 1 d e
da de Sócrates. (Pa ra Una esce na s imilar a és ta , \'. Lisis 206e3 ·207b7.j 1" plÍg. 558 del \' 0 1. 1.

101 . - 14
210 D IAlOG OS El lTIDEMO 2 11

- Dejad e ntonce s pa ra otra ocasión - dije- el ex híbl 1.0 que s uced ió después, Cr itón, ¿cómo pod ré narrar-
nos toda s vues t ras ha bil ida des y dadnos a hora só lo Ull A ido adec uada me nt e? No es fácil po r cie rto s e r ca pa z de
de mos t ración : persuad id a l jo ve n qu e está aq u í de que el I vtoma r la mi nu ciosa expo s ición de un sabe r ta n vas to c o- '
necesa r io fi loso fa r y oc u pa rse de la virt ud. con lo qu e m 111 11 en go r r oso. De modo qu e yo, a se mejanza de los poc -
com p lacer éis tanto a mí como a todos los presente s. En I \, neces ito, a l inici a r mi r e la to , invoc ar a la s m usa s y
efec to. a propós ito de este joven . la cosa es así: ta n to yu tu Memoria .
como todos deseamos que llegue en lo pos ib le a ser lo me- Comenzó, pu es, Eut idemo , po r lo qu e recue rdo . más d
jo r. Es hijo de Axíoco -cuyo padre. a su vez, fue Alcib tn 11 menos as í:

des e l viejo y primo he rmano de Alc íbta de s, el que a hora -c- Dirne. Clin ias, ¿qu ié nes son las personas que a prcn-
b e stá vivo /l_ . Se lla ma Climas. Es jove n y es ta mos pre 1!l'I\: la s q ue sa be n o las que igno ran U?
ocupad os po r él. como na t uralme nte sucede con quienes El jove n , fr e nte a semejante pregunta, en rojec ió y ca-
t ie ne n su edad, te me ro so s d e que a lguien se nos adelan to 11ll'I1ZÓ a mirarme indeciso; yo, que me habia dado c ue nta
dirigiendo su men te hacia ot ro s m enesteres y qu ed e ec ha- .11,1 desco nc ie r to en que est aba, le di je:
do a perder, Así que ha bé is llegado ambos mu y oportuna- - ¡Ánimo, Chn ias l, di con franqu eza la respuesta que
men te; y. si no tenéi s inco nveniente, poned a prueba al jo- 11' parece. E.I p ue de estar haciéndo te un gran fa vor a l pre- e
ven en nuest ra prese ncia y dia logad con él. unlarte así 8.
No bien dije casi exac tament e esas palabra s, Euri de- En ese mo me n to, Dion isodoro, incliná ndose un poco
mo contestó con arroga ncia y segu ro de sí : hue la mi y con amp lia sonri sa en el rost ro, me sus u r ró al
e -No hay ni ngú n inconve nie nte , Sócrates, con tal que uht,,:
el jove n quiera responder . - Te advie r to, Sócr-at es, que ta n to si co ntesta de una
- ¡Pu es cla ro qu e s i!, dije . Está incluso acostum brado ruuncra como de otra, el joven se rá refu tado.".
a ello . Frecuenteme nte los qu e es tán a su lado le hacen '{ mient ras él decía eso, Clinias da ba jus ta men te s u res-
mu ch as p reg unta s y d isc urren con é l, de man e ra que ha pue s ta , de modo que no pude adverti rle de qu e se rnant u- 276a
de res pon de r con bast ante seg u ri dad. viera ale r ta . Con te st ó que los que sa be n son los que
" pre nden.
1) , El d ia gram a permitirá u na ub icación má s p re c isa de lo s vrncu- Dijo e ntonces Eutidemo:
los la nuha re .. - ¿ Ha y pe rsonas a quie nes das el nomb re de maest ro s,
Ak ib iadc s el viejo 11 Ilo ?
I Ad miti ó é l qu e sI.
CHillas Axioco
I " La pregunta tiene que ver , tanto con la profe sión qu e lo s SO nS laS
A ícibtedes Clinias Clinias llltlk uron antes, cuanto con su ca pacidad para pe rs uad ir y en señ a r la
virtud.
To do s so n mi embro s de u n" po de rosa y a ristocrática r" m ilia aten ie nse: II Se trata - a qu l y en lo sucesivo- de enunciados co ntradic torios,
la de lo s eupátr idas . Alctbí ade s figura en varios diálogo s p la tón icos (A/· 1'''1' lo ta nto recí procamen te excl u yen te s. Es u n tip ico proceder de lo s
ci M ade5 prim ero, Banqu el l: y Protágoras). C/i nia5 y su pad re A ~l oc o son "II _ticos.
lo s inte rlocutore s d el diálogo pscu doplat ónlco titu lado, preci s am ent e, l. Ello s ucede , na tu ralmen te , en to da pregu nta de ese tipo qu e con -
Ax ioco. (Cf . n. 2,) It l\l(<l po r lo me no s un term in o eq uív oco.
212 D IÁ LOG OS EU TI DEMO 2 13

- y Jo s m a es t ros , ¿ no so n acaso maestros de los qu u-ponerse debidamente , tomó a l vuel o la pa la bra Dio ni-
a prenden. co m o el ci ta rista y el grama nsta 11 fu eron , ,,doro y le di jo:
maestros de ti y de e stos jóvenes c uando ér a ts ! u - Cuando os dict aba sus lecc iones e l gramatlsta, ¿quié-
alum nos? un e ra n los ni ños que la s a prendían. los q ue s a bía n o los
Estu vo de a cue rd o . IlltlOrantes?
-¿ y no e s cie r to que c uando aprendíais toda vía no e - Lo s que sabían -respondió Cilni a s.
nocr a¡ s lo que es ta bai s aprend ien do? e- Ento nc es apre nden quie nes sabe n, no los ignoran-
Reconoció que no. h' ~ , y tú no le acabas de contesta r bi e n a Eutidem o N ,
b - ¿ Y e rais person as qu e sa bta ¡s, al no conoce r eS,1 Estallaron esta vez en fo rmida bles ca rcajada s, y e xcla- d
casas? uurctones los a d m iradores de esos d os ind ivid uos , mara-
Contestó que no . villados, co m o e s taba n, del saber que ha d a n ga la , El r es -
- S i no e rais pe rsonas q ue s a bía is, ¿entonces lo/ - noso t r os- ca llaba es tupefa cto. Ahora bien, con el
ig norantes? prop ósno de de slumbrarnos a ún más, Euti dem o - que se
Dij o q u e sí. hab la dado c ue nta de n uest ra p er p lej ida d- , lejos de sol.
- De modo que apr end iendo lo q ue no conocía is, aprc n- Iur ni jove n, co nti n uó Inte rrogándol o, y, a la manera de
d ta ¡s s ie ndo ignorantes. l u ~ hábile s da nzarine s, d io sobre el m ismo punt o un do-
Asinti ó con la cabeza el joven . hit, giro a su s preguntas, y dijo:
- En c o nsec uenci a. lo s q ue ignoran son los q ue a pren- - Los que a pr en de n, ¿apr enden lo q ue co noce n o lo que
110 conoce n :MI?
den. Ch nias , y no los que s a ben , co mo tú c re ía s 1',
Ape nas habí a le rmi na do él de habla r c ua ndo, ta l co-
mo lo h ubie se hec ho un coro a la se ñal de s u di rec to r , pro-
19 Al tra ta r AIUSTónLD en las Refutacio nes sofistiws (1 " ) las fa la.
r rum pie ron en a pla usos y c a rcajadas los seguidores de , l., qu e dependen de l len gua je usado - las fa iad lll Jing üls ticas-, co lo-
e Eutidemo y Dio ni so doro; y, a ntes de que e l jo ve n p ud iera ' . en tre las pri me ru de e llas la s qu e d e riva n de la hom on im ia o eq u i\'Oo
..d ad , y d ice asl: ~ A la ho mo n im ia pe r le nKen a r¡ umenlos ta les como
tr El gram a ti sla era q u ien en señab a a lee r y esc ribir , s umi n iu ra n. 1" , sigu ien tes : 'a p ren den k.. que cc occee', p uesto que la s cosas qu e se
do los p dmeros rudimen to, de eikulo. Con el ci tarista y el pedotribl, ,lIda n la , co mp ren den los gramatlccs. En efe cl o, I'Pllllltholnein e s un t er -
qu e se ocu paba de la gimnasia y ju egos deport ivos , co n fo rma ba e1s:rupo "linu homó nimo y s ign ifica tanto 'com pren de r' valitooose de l COflOCimien-
de mae s tro s que tenia a su ca rgo la educación e le me n ta l de los nil\os ate. 1" co mo 'a dq u ir ir' el conocim iento.• M b adelanlC' , al habl a r de la apa-
nie nse s d e la época de Pe ricle s. rente so luc ión de lo s so fis mas , agre ga : . Si uno no hace dos p re guntas
l. Sócrates explica mh adela n te (277e5-278b2) este ra zonam iento .... una, no SC' produ ce la fa lacia q ue d e pende de la homonim ia (...] S i un
so bre la ba se de lo equJvoco del té rm ino griego n"nHhá..ei.., q ue puede humb re ind ica más cosas q ue un a , se ha n hecho más pregu nla s q ue u na .
s ign ific a r, ta nto _a prend e r>, como «co m p re nd e r». Ha y, sin e mba rgo, en l ~ modo q ue s i no es co r recto u igir que a do s pre¡un tas se d é una res.
o:l pasaje ot ras a mbigüeda des má s, no me ncionadas upresa me n te po r I,ue sla ún ica , es ev jde n te q ue no conv iene da r una respue sta simpl e a
Sóc ra tes. co n e l em pleo del térmi no sophós (el qu e sa be) y lInuu ht s (el ,,¡"guna p regu n ta equivoca , ni a un en el ca so d e q ue el p redk a do s ea ver·
qu e ignu ra) . El p rime ro rued e s ig nif ica r, ta n to . info rma do., cumo eca. dwdcro pa ra lo du s lu s sujetu s.• Nos hallar famos, si no, co mo su cede en
pa z de aprend en . • in telig ente s: e l segundo. «n o infor mado _o co mo . rea- rI diá logo, frent e a un a [allac ía plu rium inluroga/ionurn.
c io a aprender _, • ront c - . Asl, e n est a~ lineas, p ued e ob se rva rse có mo se J() El part icu lar giro de los danzarine s es tá exp re sad o en la pr egun ta
d es p laza, en u n cas o , el s ign ifica do d e s com p ren der s a «a p re nd e r» y, en " ,n el d ob le emp leo d e las pa la bra s ea pre nde nta p rende n... co no-
e l ot ro , de «In telig en te » a «in fo rmado • . , ,·,,/cu no ce n • .
2 14 DIÁLOGOS lillT ID EMO 2 15

Dionisodo ro, de nue vo, me susu r ró al oído: Asint ió.


~ -También és ta. Sócrate s. es o tr a igual que la a nterior - Ento nce s -concl uyó-, no has con tes ta do co rrec ta -
- ¡Por Zeu s - respondí- oy bien qu e aquélla os ha bll! mente.
re s ulta do una bonita pre gunt a! No había a ún te r m ina do de habla r Eu t idemo c ua nd o
Toda s la s que nosot ros fo r m u la mos. Sócrates -agr tuonísodo ro vo lvió a toma r a l vuelo la pa labra, co mo s i
gó-- . so n a s í: no tienen es ca pa to r ia. tuese una pe lota, apun tó nu eva me nt e hacia el jove n, y dijo:
- ¡Ya , ya l, ex cl a mé. Po r eso c reo q ue gozáis de ta nte - ¡Ah, Cli n ias !, Eu tid emo te e s tá engañand o. Dim e ,
fa ma ent re vuestros d iscí pulos. ¡ lIprende r no e s adqui ri r el c onoci m ie nto de aquello q ue
Mie nlras ta nlo, Clin ias contestó a Eut idemo que a pren lU l II a p rende ?
den quienes a prenden lo que no conocen; y éste le pregun Asin t ió Ctí nte s .
277D IÓ, en tonce s, de la mi sma manera q ue lo había hech o antes: _ y conocer -contin uó- , ¿q ué o tra cosa es q ue po-
- y bi en . ¿ no c o noces tú la s let r a s del a lfabeto? . ,'(' r ya un conoci m ien to?
- sr -dijo él. Es tuvo de ac ue rdo.
- ¿Todas ? - De modo que no co noc er e s no poseer a ún un cono- e
As intió . sunicnto.
- ¿ y siem pre que a lgui en d ic ta a lgo. ¿no di cta let ras? Asintió co n él.
Asintió. _ ¿ Y q u iénes son los que adquieren a lgo , los que ya lo
- ¿D icta entonces a lgo de lo que co noces -dijo-. si puscen o los que no lo poseen ?
t ú ya la s co noces toda s ? - Los que no lo poseen.
Asintió tambi én a eso. - Ha s a d m it ido, s in embargo, que lo s que no c onocen
- y bien - agregó- tú a p re nde s la s que a lguien d ie- ' l' cuen ta n e ntre és tos, es decir. los q ue no posee n.
ta, ¿ o a prende, en ca mbio, q uie n no conoce las le tras )I? Asi nti ó co n la cabeza.
- No es a s¡ -dijo- , a prendo yo . - En to nce s los que a pr enden se hallan e nt re los que
b -Po r tanto, a prendes lo que conoces - a ña d ió-, s i en adquiere n. y no e nt re los q ue pose en .
efecto y~ co noces to da s la s letra s u. Es tu vo de acue rdo.
- Po r t anto. los que no co nocen - d ijo- a p re nd en, CH·
)1 De 277a6·b l ui5le n alsunas dilicu llades te xt uales men ores. En nins , y no los q ue conoce n.
la t ra d ucd ó n no inc luyo la negación q ue agrega Cois lin -y que sis ue Ya se a p r es ta ba Eutidemo, de spué s de ha be r der riba - d
Bu rner-c-, y trad uzco la a ira nesació n de 271lall, tal co mo lo scl'iala Stal!· ll tl a l jo ven , a in iciar -como se hace e n la lucha- e l ter-
baum. (Cf. U. Va NWIU "OVl ITl MOeLLI!NDOllf'f, platon, Beilagen u nd Tex t·
krilik, 2.· ed., Berlln, 1962 1"" 1920j, pág. 369.) J n trod u ~co , ade más , un.
cc r asa lto n, c ua ndo adver tí que e l much a ch o es taba a
peq ue ña modi ficación en la acentuac ión de una particula (v. en lntr cduc-
cfén, _No ta sobre el tuto «) con lo q ue me pa rece que las lineas adquíe- " " no, por eje mplo, «conocer la s let ras del alfabe to s a «conoce r » lisa y
ren mejo r sentido. ¡¡"Ilumente.
)1 A la falada anterior, los extra njeros agre gan otra, la conocida tra- )) La image n de la luc ha co rpo ral, y a un la de la dcs lre~a e n a pro-
d ic ional me nte como a d icto secundum quid ad dictum simplicitcr y qu e 11l1ll'se de la pal abra com o si fues e un a pelota (276c2 y 277 ~4) , se .con \l.
«oc urre c ua ndo lo q ue se predica en pa r le es tomado co mo si fu era pre- Il l lU uqui con la compa ració n de que ela tleta sólo pod ía considera rse ven-
d icado en form a a bsolutao (ARlSTÓTELEs,Refutacirmes sof(slicas 166b38·39), l'rd" r , si hab la derrib ado tr es veces a su adve rs ario (d . República 583b2
2 16 DI ÁLO GO S EUTIDEMO 2 17

punto de de spl o m a r se. y de seoso de d a rl e un re spiro, pll , urrecto de lo s nom br es; precisamente e so es lo q ue los
ra que no se espa nta ra de no so tr os , le d ije , a nimándolo: I'lI l ra njeros te po nen de m anifie s to: que t ú no sabe s que
- No te a somb res. Ciinias, s i te parece n in sólitos el 111 ge nte tan to em p lea la pal a br a «a pre nde r »e n e l c aso de
. tos razonam ie n to s . Ta l ve z no le das c ue n ta de lo q ue 101 quien no tiene a l princ ipio ni ngún co noc im iento de a lgún
e xtranje ros e s tán ha ci en d o co nt igo: proceden de la mi . obj ete, pero lo a dq uiere después. co mo ig ualme nt e util i- 278a
m a ma nera que los que partici pan e n la cere m o nia inicia In la mi sma pa labr a c ua ndo a lude a q u ien ya t iene ta l co-
rica de los ccrt ba ntes >, c ua nd o o rga n iza n la e ntroniza- uo ctmlento. y valiéndose de é l. e xamina ese m ismo o bje-
ción del que van a in ic ia r. En es a oc as ió n -lo sabe s, a de- l o ; se t rate. en fin. de al go que se ha d icho o q ue se ha
m á s, s i ha s sido in ici a do- se lle va a cabo un a sue rt e de IlI'cho. En es te caso. es ci e r to. la ge nte em pl ea má s bien
e jubilosa da nza ; y e llos dos. a ho r a , no ha cen o tra cosa qu e «compr ende r .. q ue «a pr ende r .., aunque a vece s u sa ta m-
bailar a tu a lrededor. como si estu viesen brincando jug u é hléu «a pre nde r» l J . Ma s no ha s advertido esto - q ue ellos
to na me nt e, c on el pr o pós ito ulte r ior de ini ciarte . Consí- 11" han hecho m an ifi esto- : u n m ismo no m bre se a plica a
de ra, pues, po r el mom en to, qu e has escucha do los preám- personas q ue se encuent ran en s ituac iones o puestas. e s
bu los de u na consagración sofistica. En primer lugar ", decir, al que sabe y a l q ue no ¡,a. Algo así suc edió. en efec -
co mo enseña Pródico " , es meneste r q ue a pr endas e l uso 11I, también con el con te ni do de la seg un da pregunta. cuan- b
111 le in terrogaban si a prenden los q ue conocen o los que
110 . S emeja n tes enseñanza s no so n, s in embargo. más q ue
y F~d ro 256b4.5J. El pri me r _au lto a comp rende d esde n5d2 hu la n6c7,
e l se gund o, d esde 276d7 hasUi 277c7. un jue go - y ju sta mente por eso d igo que se d ivie r te n
l<I Los ri las co rlb. n lico s p revenían d e los c ultos de 1:;. d io~ Ctbele, co rr ugo-e: y lo lla mo «ju ego », porqu e si un o a pre nd ies e
d e origen Iri gio. Hic ie ro n p ro pias las fu ncio nes c u ra li vas d e la diosa y, mu c has su tilezas de e sa índole, o ta l ve z toda s. no po r e llo
gradua lmen le, adq uirieron u na e:lb tenci.aindepend iente. Estos ntcs cc m-
po rt;> b<> n mo vimien to s q ue e ra n u na co mbinac ión de fr en é lica s danzas,
eubrfa m á s acerca de có mo so n realmente la s cosas , s ino
sal tos y melod ías p rod uci das po r n aulas , qu e a dq uirla u n s in gular ca· que só lo seria c a pa z de divertirse con la gente a propósi-
rae eer s u byugan te. En la ce re monia q ue prec ede a la Inic iac ión , los ccrt- lo de los difere nt e s significa dos de los no m br e s. ha ci é n-
ban les rodea n a l nec üt o, co loca do e n un tron o , y le danzan alrededo r dole za nca d ill as y obligán dola a ca e r por e l s uel o, e nt re-
(v. L M. L IN roU H , Tile Corylu"" ic Rites in Plato. Un lv. of Ca liE. Pub l. \n
teniéndose a s! con e lla de la misma m anera que goz a n y
Class. Ph ilolocy, vol. 13, 1946, S. es pec ia lme nte pá gs. 124 y Slg5.• do nde
se e:la m ina es te pasaje de EUlidemo). t len quienes q ui tan la s ba nquetas de los q ue es tá n por se n-
", El correlativo ee n segu ndo luga ra aparece rá m! 5 ad elan le, en tur se c ua nd o los ven ca ídos boca arr iba. Ten e n c uen ta , e
2nd, c uan do se pasa a olra cues tió n: el la do <ser io_ del s a be r de 101 pues, q ue e s ta s cosas no ha n 'sid o má s que un jue go por
e xtra nje ro s. pa rt e de e llos . Pero, e n fin . en seg undo luga r, es evide nte
Jo Famoso so fisl a. na tu ra l de Ceo s, algo ma yor que Sócrates y más
jo ven que Protágoras, c uya «especialida d era la p reci 5ión en el uso del
till e precisamente ellos mismos te pond rá n de m anifie sto
le nguaj e y la c uida dos a d is ti nció n de los sign ificad os de las pa labras co-
múnm ent e conside radas s inón imos. (IN. K. C. G U1 H RJE, A History of Gruk oI"d e n la a fir mac ió n. Pero la mejor p re sen tación platón ic a de la moda li-
Philosop hy, vol. 11I, Ca mbrid ge, 1969 , pág. 222), a la que tamb ién se re- ,1.".1 de Pr e dic o, pu ede verse en Pro/ágoras (337a l-c6). Cl. pa g. 549 de l
n e!'e Plat ón , em plea ndo la mi sm a exp res ión qu e apa rece aqul (onÓmo;. ",,1. l.
/011 orthótes), e n Crátilo 384b 3·6. Su s co ncepciones éticas son tam bién )1 Un ejem plo puede encon tra r se má s a dela n te , en 305c5.
impo rtan te s y nad a de sde ña bles (v. JENOfO NTIl, Recu erdos de Sócrates JI JI Mlln¡him eill s e puede pre d ica r del qu e sab e (entonce s, es «com-
1, 21·34). Sóc ra tes se cons id era ba s u disclpu lo, me zclando ironla y serie- I', c,nd e r o), como del que no sa be (ento nces, es . ap renda. ).
2 18 DIÁLOGO S E UT IDEMO 2 19

ei la do serio de su saber, y yo por m i parte he de a ntlc Ning u no - res pond ió Cli nias. 279a
pa r me a ello s pa ra que no de je n de cu m pli r lo qu e ha bl.. s- Bien -repus e-, prosi gamos; pue sto q ue que remos
p ro met ido. Ha bían dic ho . en ef ec to. q ue ofr ecerían un .r l d ichosos, ¿ có mo podríam os se do? ¿ Quizá poseyend o
de mos tración de s u sa be r exh ort a tivo, mas me pa rece ah uun hos bie ne s ? ¿ O es és ta un a preg un ta a ún má s inge-
fa q ue ha n creído nec e sa r io, pr im ero. juga r co nti go. 1111 11 qu e la a n te r io r ? Es obvio que e s así, ¿ no?

bie n, Eu tidemo y Dio n lsodoro. habé is hec ho ya vuesuu Asint ió.


d jue gos - y se gu ra me n te son s u fici e nt e s- ; dad nos emon - Ve a mos, ¿cuáles so n la s cosas q ue so n bie ne s para
ces a cont in uación una demo stración e xho rtando a es t 11". utros? No me pa re ce una pr egunta d ifíc il, ni menos a ún
jo ve n acerc a de có mo debe c u lt iva rse e l sa ber y la virt ud ' Iur req uie ra la intervención de un individuo de inge ni o
Pe rmit id me , sin embargo. a ntes , que os muestr e cómo el l' ro co ntes ta r la. Cualq u iera diría que el ser rico e s u n
t ien do yo la cosa y có mo deseo e sc uch a rl a . Y si os ha J bten , ¿ no es cierto?
parece r que procedo co n si m p le za y provocando el r id t - Po r su pue sto -respondió.
c u lo, no o s bu rl éi s d e mí : sólo por el de seo q ue te ngo de _ ¿ y también lo es el estar sano, e l ser be llo y el po-
escucha r vuest ro sa ber me atrevo a improvisar frente 1. t i ('T c onven ien te m e nte to das la s demás c ua lida de s fl · b

e vosotros. Tra ta d. pues , ta n to vosotros como vuestros di . I,'II S ' l ?


ci pu los de e scucharme s in re ír; y tú , joven hijo de Axíoco, Asl le pareció.
te n a bien re sponderme. - Adem á s, ¿la noble a scende nci a. el poder y la e stima
- ¿No de se amos ac a so todos nosotros, hom bres, se r dr lus propios conciudadanos son sin d uda bienes ?
d tcho sos > ? ¿ O e s ésta , ta l vez , una de aquellas pregun- Asin tió .
tas q ue ha ce un inst a nte temía q ue' p ro vo ca r an e l r idic u- _ ¿ Y q ue o tros bi en es nos quedan aún ?, pr egunté. ¿Oué
lo ? En efecto, e s s in duda cosa de locos pl a ntearse s iq uie- euu , e n fin. el se r prudente , justo, valeroso ? [Por Zeus!,
ra se meja nt e c uest ió n. ¿ Qu ié n no q uie r e se r d ic hoso ? " . I ( recs t ú, Clinias, q ue procedemos correctamente si los
lO La u p r~sión gr iega .eu p rd /f ei n _ "i¡ n ü ica no só lo . ha llarse
. nn stder a m os a és tos co mo bienes ?, ¿ o no ? Porq ue q ul-
b¡o:n . , 0:" dec ir, «te ner IOrlu na _ o ' é ~ ito ., sin o lam bién «o b ra r bien•. o , AIi a lgu ien pod ría d isc utí rnos lo. ¿A ti q ué te pa rec e ?
~a. rcc l a mo::nl ~. De es te ú h imo p rocede el sign ifica do d e .ser feli z- O - So n bi enes -co nt es tó Clinias.
•d ichos o •. Pero ~s l a a mbigüe da d. s in e m ba rgo , no ha d e a lecta r - co mo - De acue rdo - repuse- ; aho ra, en c uanto a l sa ber. e
sUl'ed ió a n lo:s - la validel de lo s a rgu memo s q ue sig uen.
itlué luga r le darem os ? ¿ Ent re los b iene s... ?, ¿ o qué
010 El Protr épuco de Já mblico t ra nsc ribe , sin me ncio na r la fuen te,
tod a la a rgume n lac i6n q ue va desde el co lnie nzo de es te pá r ra fo (278e3) pie nsas?
ha.1a 2112d l. Las 144 ltneas se rfii uco:: n, sin em ba rgo. en Jám blico , a 58 - En t re los bien e s .
(24,22.26.24, ed . PISTl!Lu l, po rqu e e sle últ imo - o la fue n te ín termedla de - Pr e sta aten ci ón, po r favo r, que no o m ita mos ningú n
dond e p ud o haberl o tom ado, ta l,vn d P ro l ri pltro d e Aris t6 tel es- omí- hien q ue se a di gno de co nsideración.
le la s ro::s pues tas de e lin ias, 10 5 detalles de la conve rsaci6n ~ sup rtrne la.
ejemp hftca c fones, lim itán do se a repro d ucir lil e ra lment e s6 10 los argu-
me n tas y s us concl us iones . 1. DU EIlIN(; (A n. ro/le'. Pro/repIte",' : AI1 A rlempl u Es ta serie in icial d e cu atro bienes aparece en Leyes (63 Ic2·4) y en
a l ReCO I1Sl rUCllOI1, Gote borg, 1961) pie nsa que justam en te es t~ pasaje de Mrnó n (87e.5). Ro:du cid a a tr es, en Go rgias (4513·.5) y tam bién e n Leyes
Eut i demo «co ns tituye e l p rimer eje mp lo que ha llegado hasta no sotro s (flbla607). El o r den, e mpe ro, no es e l m ismo q ue e l da do en E Ul i demo:
de un tí pico pror r éprlc o » (pá g. 19), q ue s ir vió, a demá s, «co rno mod elo ge- rn todo s esos casos m encionados , la sa lud aparece en primer té nnino
ne ra l de todo p rotré pt lco- (pág. 180). y lu rique l a en últ imo,
220 DIÁ LOGOS EU T IDE M O 221

- Me pa rece que ni ng u no - respondió Clinias. _ Ade más, ace rca de los pe ligr os del mar, ¿c rees qu e
Mas yo, reco rdan do. agregué: . Ill lllcn pu ede logra r má s éxito q ue, en términos ge ne re -
-c-Pe ro, ¡por Ze us !, tes posib le q ue jus ta me nte haYI 1, a, los p ilotos q ue s a be n ?
mus o mi t ido el mayor de los bien es! -c- Desde luego q ue no.
-¿Cuá l? _ V más aún: s i est uv ieses luchan do , ¿con qu ién com -
- ¡El éxttot , Chnia s, aquello que todos, a ún los meno pUl tirias más el pe lig ro y la sue r te, con u n est ratega que 280.
pe rspicaces. d ice n que es el mayor de los bie nes. alll\(' u con uno que no sabe?
- Es verdad - d ijo. _ Con el que sa be ,
y yo , reca pacita nd o , a ñadí: - V s i es tuv ieras enfermo , ¿con quien prefe r irlas
d - Poc o fa ltó. hijo de Axtoco. pa ra que hic iésemos el r «nont ar los riesgos , con un méd ico que sabe o con uno
dícu lo tú y yo, a los oj os de los extranjeros. ' jl lt' lI O sabe?
- ¿P or qu é? _ Con uno que sa be.
-Porque d espués de haber incl u ido al éxito en nue -c- Entonces - d ije- , ¿es porque crees que tend ría s más
tra lis ta anterior. volvemos ahora a t raerlo a colación nl lu ac t uando con el que sabe que con el que no sabe?
nuevament e. Ace ptó .
- ¿ Y bien? ¿Qué h ay con ello ? _ En co nsecu enci a, el sa be r s iem p re proporciona exi-
- Indudablemente es r idí cu lo vo lver a considerar lo 11 . 11 los hombres. No podría suceder, en efecto, que alguien
que ya se t ra t ó, repitiendo dos veces la misma cosa. verre por sa be r, sino que necesariamente debe obrar bien
-¿ Por qué dices eso? p regun tó. \ lograr su propósi to; de otro modo, no seria sa be r.
-Preci sa me nt e el sa be r - d ije yo- es exuo u; lo en Llegamos, por fin , no sé cómo 4:1. a esta r de acuerdo b
te ndería has ta una c ri a t u ra. l ' lI qu e, en re sumen, la cosa es as í: quie n di spone del sa-
E.I se qu edó asombrado-es a ún ta n joven e ingen uo- Iu-r no necesit a po r a ñadi dura del éxito. Y un a vez qu e nos
y yo, dá ndome cuenta de su asom bro , le dij e: pus imos de acue rdo en eso, vo lví a in terrogarlo pa ra ver
- ¿Acaso no sa bes. CJin ias, que e n el buen uso de las qué s ucedía co n nu estras afirmacione s a nteriores.
e fla utas son los flaut is tas quie nes t ienen más éx ito? - Ha bía mos co nve nido" - recordé- qu e si poseyese-
Est uvo de acuerdo. 1I10 S muchos b ie nes sería mos [eltces " y dicho so s.
-¿ y que , cuando se t ra ta de la lec t ura y escritu ra de
la s le tras - añ adí- son los maestros de p ri meras let ras ?
- Por cierto, . 1 Cau to reparo pla tónico ace rca d el valo r gene ra l de un a conclu-
11/'11 lograd a sólo induc tiva me n te a través de los casos me ncionados .
.. En 279a3.
' 1 Pla l6n emple il de nu evo aq ul, en fo rma deliberada, como ya lo hl. os Eu daimo neí n, in tro d ucido aquí po r p rime ra vez en el d ié logo,
zo an tes con e u p rárle in, una exp res i6n in icia lmente a m bigua, pe ro sin I l'"u'c e como sinÓllimo de eu prálleitl, partjcu la rmeme en el sentl do fuerte
qu e d io a fec te la argu me n tación, p ues to q ue su co nt en ido es inm cdtata. '1"" Sócra te s asigna a este ú ltim o. Conv ie ne adver tir qu e Sóc ra te s exhi-
mente pre cisado. E lAluk hfa nen e en griego tanto e l sign ifica do co rr ie nte lo.. ,Iclib erlld a me n te cie r la libertad en el emp leo de los . in6n imos . l.e ím-
de concu rre ncia accidental de circ uns lilIlcias favorables -es decir «buena 1'' '1'11l con ello d est a ca r su preocupaci6n po r lo qu e 1115 pa labras s ignifi.
sue rte o-, cua ndo el me nos comú n d e -éx íto » resu lta nte de la ace rtada • 1'" _ s iemp re q ue no gen e ren co nfusi o nes- m ás que po r las s u tilezas
ele cció n de med ios para alc a nzar u n fin. " ' I"C pue de dar luga r el uso inadecua do de los t érm ino s.
222 DIÁLOGOS EU TID EMO 223

As intió. , lisa cua lq uiera que s i la deja estar; en e l pr ime r caso, hace
- Aho r a bien, ¿podria mos se r fe lice s po r medio de (' 11' un ma l; e n e l o tro, n i un mal n i un bi en . ¿ No es a s! ? 28 1a
biene s si no no s si rv iesen pa ra nada o si nos s irve n pa Aceptó.
algo? - Ent onc es, en e l t r a bajo y el empleo de la made ra, lo
- Si nos sirven para algo -contestó . 'lile ha ce que se la use cor-rec t am ente, ¿ es a ca so otra co sa
-¿ y nos serv iría n para a lgo si sólo los t uviése mo s, que e l conocim iento d e la c a r p ín te rt a ?
e ro no lo s u sásemo s ? Por ejemp lo, a propósito de los nI! - Ningü n o t ro, ev idente mente - di jo .
men te s . s i t uviésemos muc ho s. pero no los co miéramo - Má s a ú n: en la fa br icaci ó n de lo s imple mentos de la
0 , a propós ito de las bebi das. s i di spu s iéramos de mu ch as, 1 lisa, es s in d uda e l co nocim ie nto e l que hace pos ib le su

pero no las be biésemos. ¿ nos servi r ía n para a lgo ? «dcc uada rea lización.
-e-Eviden te me n te , no - d ijo. Es t uvo de acuer do.
- Bie n. Y si tod os los a rtesa nos posey esen tod os l0' - Así, pue s - a gr egué- , ta m bién a ce rc a de la utilidad
instrume ntos que ne cesita n, ca da uno p a ra s u propio t TU ,11' los bie ne s de los que hablábam os a nt es - riq ue za , sa -
bajo, pero no los u sa sen , ¿ s erí an d ic hosos con esa po se lud. bell eza- era el conocim ien to lo que llev a ba a s u rec-
s ió n, por e l solo hec ho de te ne r todo lo que neces ita po Io uso y d iri g ía co nve nie ntem ente la a cció n, ¿o e r a o tra b
see r un a r tesano ? Por ejem plo, un ca rpintero, s i dispu siese: , usa ?
de to dos los im pl em entos y de la madera nece sa ri a, pero - Er a e l co noci m iento -dijo.
no fabrica se nada , ¿ le se r virl a de a lgo t ene r t od o eso? - De m odo entonc es que no só lo el éx ito, sino también
d - De ni ngún modo -d ijo . 1'1 buen uso , parece , tr a e apa rejados e l co noci m ien to de
- Má s a ún , si a lgu ien posee r ique za y lo s bienes , 10 ' IIlJo tipo de pose s ión o actividad .
dos, q ue a cabamos de nom bra r, pe ro no los usa , ¿ seda fe. Asint ió
Iiz por la sola pose s ión de e llos ? - Ma s, tpo r l eus! - d ije- , ¿tienen alguna u tili da d los
- No, por c ierto, S ócrat e s . demás bienes s in la ayuda del d is ce rnimi en to y del sabe r?
- Se gú n parec e , p ue s - d ije - . e s necesar io q ue e l q ue ¡Saca rl a acaso p rovec ho un hombre pose ye ndo y ha d en-
quie ra ser fe liz no sólo posea semejantes bienes , sino q ue 110 mucha s c os a s si n te ner cabeza o más le valdria po seer
los use, ya q ue ni n gún provecho se o btiene de la me ra IK)CO y hace r poco [te n iendo cabeza .. ] ? Flja te: haciendo
poses ión . menos, ¿ no se equivocaría menos ?; equivocándose menos, e
-Es ve rdad. Ino haría menos m a l ' 7 ?; h acie nd o me nos m a l. ¿ no se r ía
e - En to nc es , Clinias, ¿es s uficien te só lo e so pa ra se r fe- menos infe liz?
liz: poseer los bie ne s y usa rl os ?
- Me pa r ece que sI. .. Estas pa la b ras. q ue figu ro n e n los códice s, las omite Já mblico. e

,
- ¿ y ta n to s i u no lo s u sa co rrec ta me n te - agregué-,
co m o S .I no ....
IIA IlIIA M(Eurhy dt ", u s t I Lgc hes, Jena, 18ó5) tu a tel iza, como lo hacen
,le. puo! s o tros ed ito res . En efecto, en la a rgumen ta ción q ue li gue no se
1r111" de una an Utes i. en tr e «te ne r ca beza . y . no te ner ca beza », sino s6-
- Si los u sa co r r ec tamente. In e ntre «muc has cosas . y « poco ~ .
- ¡Ah ..., m u y bien! Es peor, p ues , a m i m odo de ver, .7 Deli be ra d ament e ju ega a quí Sóc rat es, a la man era so fist ica ya
e l daño q ue se produ ce s i un o u sa incorrect amen te u na ejem plifica d a a nte s. con e l do ble s ign ificado de la exp res ió n kat ó$ prál-
224 DIÁ LOG OS EUTI DEMO 225
- Indud a ble me nte - d ijo. - Pa semo s e ntonc es a ho ra - d ije- a c o ns ide rar lo q ue 282 a
- ¿ y ha r á, ta l ve z, uno menos sie nd o pobre o SiC llI l1 IH U I no s re st a e xa m ina r. Pue s to q ue por un la do de se a m os
rico ? I"ltus se r fe lic e s " -y se ha visto qu e lle ga mos a se rlo a
-c-Sí e nd o pob re - d ijo . p" "lir del uso de la s c os a s, o, mejor a ún, del buen uso de
- ¿Débil o fu erte ? r llas- , y q ue , po r ot ro lado, e ra e l con ocim ien to el q ue
- Débi l. ruoc u ra ba la rec t it ud y e l é xito, es ne ce sario, constguíen-
-¿ Ilu st re o desconocido? u-me nte, seg ún pa rece , que c a da homb re se di s ponga por
Desconoc id o . rudos s us m edios a lo grar esto: e l m a yor-sabe r posib le ,
-¿ y ha ce m eno s e l q ue es va le roso y te m pe ra nte o I n no ha de ser a sl ?
co ba rde? - Así es -dijo.
- El cobarde . _ y s i uno pien sa q ue e s es to, en ve r dad, lo qu e ten-
-¿ Ta mbién u n haragán. en tonces , m á s que u n dil l L1 d a q ue recibir del propio padre. m ucho m á s que la s ri -
ge nte? que za s , y de los tu to r e s y a mi gos -tanto de los q ue se de- b
Ace p tó . l laran enamorados como de los dem á s-, conciudadanos
d -¿ Y u n lento q ue un ve loz . y uno que t ie ne mala vi sl ll ocxr ra njeros. y s i a ellos ruega y su plica que lo hagan pa r-
y o ído q ue un o que los ti ene a gu dos? t ui pe de l sabe r , en tonces, Clima s, no hay nada ve rg onzo-
Am bo s es tu vimos de a cue rdo en tod os e stos puntos 11" ni indigno si un o se vue lve co n tal propósi to sie r vo o
- En s uma Chn ias -d ije- opa rece qu e a p ropósito d t- .. c la vo no só lo de a lgún ena mora do, sino de c ualqu ier

todos lo s que antes afi rmábamos que eran bienes. la cue hom b re _y di spuesto a rend irle un se rv icio cua lq uie r a ,
rión no es acerca de cóm o e llos en si y por sí sea n natu IlItI tal de q ue sea hon ora ble -e , por el so lo deseo de con-

r a lme nte ta le s . s ino que el as unto se plantea , m á s bien. ver tt rse e n sa b io; ¿ o no lo c rees tú asi?, d ije.
de esta manera: s i los guia la igno r anci a. son male s peo- - Me parece que está muy bie n lo que ha s d ic ho - re s-
re s que s us cont r a r ios, y tan to peore s c ua nto m á s ca pa pon d ió.
ces son de se r vir a un a g uia que es mala; m ient ras q ue, - Po r lo m e nos, Clin ia s - agregué-, e n e l caso de q ue e
s i los d ir igen e l di sce rnim ie nto y el s a ber r esulta n bren e s 1,1 sa be r pueda se r ense ñ a ble y no se dé es pontá neamen te
e mayores, ya q ue, por si, ni u no s ni o t ros tiene n valor 1'11 los homb re s , cosa q ue , en ef e cto, no ha s id o a ún díscu-
a lguno. lhla po r noso tros ni hemos a rribado a ce rca de e lla , tú y
- Evide n te mente - d ijo- par ec e q ue e s a sí como tu yo. a ningun a conclusión ",
ind icas. - Pe ro a mi me pa re ce, Sóc ra te s - d ijo- , qu e e s
-¿ y qu é co nsecuencias, e nto nce s, sacamos de lo que en se ñable.
hemos d icho ? ¿Al guna otra , a ca so, q ue, de todas la s co - y yo , en can ta do, le respon dí.
s as, ninguna e s un bi en ni un m al, a e xcepción de e sta s - ¡Br a vo, buen hombre! Has hecho bi en al li be r a rme
dos: que e l sa ber e s un bi en y q ue la ignor ancia es un mal ? tic un a la rga in da ga ci ó n precisamente a prop ósito de es-
Admitió que s í.
teí n, q ue es «ha ce r mal . ya se a por «ha cer daño. o por . fr ac as ar •. L. . . . Fe lic es . reem pla za aq uí a «se r dicho sos . (d. 278e3 ss.).
a rgumen tacl6n no se res ie nte por la a mbigüe da d n i se a poy a en ella, •• Es asun to qu e. como se sabe, se tra ta en Pro tágo ras y en M en ó n,
(,1. - 15
226 DI ÁLOGO S EU T IDE MO 227

te pun lo: s i el sa be r es en se ñable o no . Ahora , e ntone Dime, Sócra tes - com enzó--, y ta m bién voso tros to-
pue s to que no s ólo te pare ce q ue lo e s, s ino que , a dern ,lt"t lllC a fir m á is de sea r q ue es te jo ve n s e convie r ta c n sa o
d es lo ú nico ca paz de hacer a l homb re fe liz y exitoso, ¿el 1.10 , J.bromeá is a l deci r eso o. e n ve rda d, lo des eá is y ha -
a i ra c os a d iría s s ino q ue es necesario fil osof ar. y qu e' ( I ,I AI ~
se r ia m en te ?
m ismo t ie ne s la int en c i ón de ha cerlo ? Me di c ue nta e ntonces que, evidente mente, e llos ha bla n
- ¡SI. po r cie rt o, Sócra te s - contestó--, y ta n to c u ' llpllCl'i to que noso tros e stá bamos juga nd o c ua ndo a l pr in-
lo sea pos ib le ! Iplo les ped imos q ue di sc urrieran co n e l jo ven . y q ue, po r
Sat is fec ho de o lr ta l res pues ta , d ije: • •" mismo, e llos ta m bién ha bía n j uga do y no habla n ha-
-E l e jem p lo -el mí o- , Dionisodoro y E utidemo. 1I hl'lllo se r ia me nte; y co nvencido de e llo . insis tí con to da e
c ómo de seo yo q ue sea n los d iscu rsos e xho r tat ivo s. a qu ,. tu-mcnc¡a en que ha b lá ba m os realmente en serio .
lo tenéi s. s im ple tal ve z, emba razoso y a lgo d ifuso; pe. Dijo e nto nce s Dionisodoro:
qu ien d e vosotros dos q u ie ra. há ga no s u na d emostra cfo _ Med ita bi e n, Sóc rates. no se a que te nga s q u e ne ga r
tratando e s te mismo asun to co nforme a las regla s d IlI h adela nte lo que ahora d ices .
t arte - . Y s i no queréis hacer eso, retomad desde el lugu - lo he meditado -repuse- y no me ha de s uc ede r
donde dej é y demost rad al joven lo que s igue: o que es pt 'lur I legue a ne garlo.
c tso adquirir todo e l conocimien to en su totalidad. o bien _ y bi en - d ijo- . ¿ insis tí s en q uerer q ue se convierta
que hay uno so lo q ue de be a lcanzar para conver t irs e eu 111 "ubio ?
ho m b re feliz y bue no y cuál es ése. Ta l como lo decía el! - Po r su p uesto,
u n co m ienzo SI, nos importa muc ho q ue es te jove n lIegu _ y en e ste m o men to -c-preguntó-,. , ¿CJinias e s s a bio
a se r sa bio y bue no . " no ?
283a Eso fue lo que d ije. Cr it ón , y tenía concentrada abso - Po r lo m en os é l di ce que no lo e s a ú n. y no es
lut ame nte toda mi a tenció n e n lo q ue habri a de suceder, pe tulan te .
o bse rvando de qué m ane r a particular e ncara rían e llos la - y vosot ros -dijo-, ¿ q ue ré is que s e co nv ie r ta e n a l- d
c uestió n y por dónde comenza r ía n para pe r su adi r a l jo- !tllien q ue sa be , que no sea m á s igno rante ?
ven a l eje rcici o del sabe r y de la virt ud. Comenzó a ha- Ad m it im os q ue s l.
blar p r imero Dio nl sodo ro. e l m a yo r de los dos. y todos d i. - Po r tan to . queré is que se convie r ta en lo q ue no e s,
r ijimos n uest ra s m ir a da s hacia é l. co mo s i fuésem os a a lr \' q ue lo q ue a ho r a es no lo sea m á s.
e n seg uida va ya a sa be r q ué m aravilloso s d iscur so s. Y, pre- Al es c uc har esas pa la b ras q ue dé de sco ncert ado, y
b c isarne nte, es o fu e lo q ue s uc ed ió, ya q ue e l ho mbre ini- mient r-as no sa lía yo de m i tur ba ción , a r reme tió él
ció. Cr tt ón. un d isc urso m a ravilloso; y va le la pena que llil' ic n d o :
escuc hes q ué e fica z e ra pa ra e xhorta r a la virtu d . - Pe ro s i que r éi s q ue no se a m á s lo q ue e s a hora, ¿q ué
oun cosa q uer éi s sino, a par en te m en te, su m uerte ? ¡Po r
se La contra pos ición cnl re «reglas del a rte . y . slm ple. , es decir, ono t Iert o que so n no ta ble s a m igo s y ena mor a d os és tos que
pro fesiona l. (d . 278d5) es irón ica. mientras que «e mba razoso y algo di. l11 a s q ue n ada desean la mue rte de l ser q ue r ido ~l !
Iu so » a lude n a la dial écti ca soc rá tica q ue e xige una marc ha lenta y pro '
lija pa ra logra r s u prop ósi to . !l La falacia consis te, po r un Jad o, en qu e se pasa de ene se r algo
11 cr. 275;1.9.
l'" u icuJa r . (Ignora nt e) a «no ser en forma ubsolura », es decir, confusión
228 D IÁ LOGO S E UT IDE MO 229

l! Al al r esto, se indignó Ctesi po po r su amado y e xcb De ac uerdo - respondió Ctesi po - ; pero s uc ede, b
-c-Ex t ranjero de Turios, s i decirlo no fuera m ás hi 1 uudemo, que quien ha di cho eso u . no ha di cho la s co-
una groserta. te replicaría: - ¡oj alá qu e le suc edie ra a 11 11 q ue son.

ya q ue se te ha ocurrido proferir de mí y los demá s scnt y Euti demo:


ja n te m en tir a - q ue yo q ue r ría qu e él est uv iese muerto l'ero la s cosas q ue no son - d ijo- no ex is ten, ¿ no
y cuyo solo e nunciado, c r eo, es po r c ierto una im pie dm • , ter to ?
- Pero, ¿cómo?, Ctesi po - in te r vino Eu tide mo No ex is ten.
¿ c r ees a caso que es p osible m en tir ? Entonces , ¿las cosas q ue no so n , no existe n e n ni gu-
- ¡Por Zeu s que sü. si no he perd ido la cabeza - re' 1111 parte?

pondió. _ En ninguna pa rt e.
-¿ Dici endo la cosa de la qu e se habl a. o no dící éndcle _ ¿ y es posibl e, r especto de esa s cosas qu e no son, que
284a - Dici é ndola -co nt es tó. .Iltu icn realice a lguna acción, de modo ta l qu e e llo s qu e
- Si u no la di ce. ¿ no di ce nin guna otra de las cosas qu .li'1II a llí o u n ind ivid uo c ua lq u iera pue da n p roducir esas
son, sin o preci samente aquell a que dice ? I " .. a s q ue no exi st en en ninguna parte ?

-¿ Y cómo po dría si no ? repuso Ctesipo. - Me parece q ue no , arguyó Ctesipo.


-Pe ro la qu e di ce es ta m bié n un a d e la s cosas qu e son, - y bi en , c uando los o ra dores di ce n a lgo fr e nte al púo
d is tinta de las demás. hll r u, ¿a ca so no re a lizan una a c ció n ?
- Po r s upues to. - La realizan -co ntestó é l.
- ¿ y el qu e la d ice, d ice, pues, lo q ue es ? - ¿ Y si la re a liza n, e ntonces pr oduc en ? e
- ¡Síl - Cla ro.
- En tonc es e l q ue d ice lo q ue es y la s co sa s que son, - ¿ De m odo que «deci r» es «r ea liza r » y tamb ién
dice la ver d ad; de manera qu e si Dtonísodorc dice la s cu- - urod ucí r »>
sas qu e son, está d iciendo la verdad " , y a t i no te está dí- Admitió que sí.
Ciendo m ent ira algun a. - Po r lo ta n to - a gr egó- , nadie d ice la s cosas q ue no
a u n ; diciéndolas , prod uci r ía ya a lgo , y t ú ha s reconoc ido
de lo re lativo co n lo a bsolu to (v. n. 32); po r otro lado, en e l ca m bio d~
¡ ¡ li t' es imposi ble qu e a lguien s ea capaz de produci r lo qu e
sign ifica do del verbo ose r o, q ue es usedo co mo có p ula junto a oignoran.
te . y, luego, en forma ind ependien te con si gnifica do existe ncial. 1111 es: de manera que. s egún tu mi s ma a fi r m ac ió n, na di e
'1 La falacia se apoya lan lo en la a mb igüe dad d e la exp re sión !tgtill puede decir una m e nt ir a, y s i es ci erto que Dioni sodo rc
1;' Que significa edectr d e a lgo. como edectr algoo , cuan to en t4 Ól11a, que dice a lgo, di ce la verdad y dic e cosas q ue so n.
pued e correspo nde r a.1o q ue eh y . a lo qu e rs verda&roo (s us ne gacio- - ¡Po r Zcus que sü, Eutidemo --contest ó Ctesipo-, pe-
nes, res pec t iva me nte, a 010 q ue no eh y a 010 que es falso o). PaocLO, en
t l) ocu rre que él, de algún m odo, d ice las cosa s que son ,
el Comel'lf4rio 4/ .Crá liloo tU P14 1ÓI'I (37, ed . P ASOUAU) resu me bien la po-
s ició n: e tod o e n unctadc es verdadero, po rq ue el q ue dic e, d ice a lga(Ugei pe ro no las dice, sin embargo, ta l co mo efec tiva me nte so n.
ti); el q ue d ice a lllo, d ice lo q ue es (t o el,,), y qu ien dic e la Que es. d ice vee. - ¿Qu é es tás d ici endo, Ctesipo ?, inte rvi no Dion isodo-
dad •. AlIl Procl o. co mo lo habla hec ho Aristó teles ant es. at r ibuy e n esta ro, ¿hay ac a so q uien es dice n la s cosas ta l como efe c tiva- d
tesis a An us re nes: sin emba rgo. Pla tón la re mon ta a l circulo de Pro tágo-
ras. De todo s modos. la argum entaci ón se hace e qu¡ más densa y tec m-
mente so n ?
ca, y tien e, induda bleme nte, un fuerte con te nido elea ta. •• Lo q ue afirm ó Dion iso doro en 283d S·ó.
230 O IÁLOGOS E UT IDE MO 231

- Cla r o qu e los ha y -repuso- : la s personas de llh C O IIIO m e par eci eron bast a nte ir- r -itados el u no co n el 285a
y q ue d icen la ver dad. " t 1 ti , com e nc éyo a b rom ea r con Ctes ipo y le d ije:
-c-Es c úc ha me -ag reg ó-, ¿ no es cie rto que las e Ul d - Cn..'O, Ctesipo, qu e tendríamos q ue a cepta r lo q ue no s
bue nas so n e fec ti va me nte un b ie n y las ma la s, un mili .IIt en los ex t ra nj e r os , ya q ue nos lo of r e cen de b ue n grao
Ace p tó. .111, y no segu ir di sc u tiendo po r un a palabr a. Si, e n efec-
- y tú a d m ites qu e los ho m br es de bien dice n las 1.: 1 In , co noce n el modo "de hace r morir a st a los ho m b r es. de
sas tal como ef ec ti vamente so n? manera ta l q ue de ma lva dos e insensatos los vue lven bue -
- l o ad mito . 11 m y se nsatos, se a qu e haya n descubie r to e llo s m is mos
- En ton ces la s pe rson as de bie n. Ctes ipo - ai'i adió 11 uprendido de a lgú n o t ro es ta sue r te de des trucci ó n y b
d ice n m al ') las cosas m a la s. s i las d icen tal como ef ccu muerte q ue hace q ue des t ru ido q ui e n sea malvado re a pa-
vam en t e so n . 1I'1ca tra ns fo r mado e n bu en o; s i, pue s, conoce n el modo
-¡ S í, po r Zee sl, así es preci sa mente - re p licó--, po i .Ir hac e r esto - y es evi den te q ue lo conocen , ya que r e t-
lo menos c uando se r efie r en a gente mala; y tú, si desea. vtnd tcaban pa r a sf el arte , r eciente m ente descub ie r ta , de
ha ce rme caso, procur a no ser u no de es to s ú ltimos, si 11(1 hac er- bue nos a los malvados-e, conced émos les entonce s
e q uie res qu e las pe rsona s de bien h a blen m al de ti , PUt'1 111 till e p iden : destrúyannos a l m uc hacho, co n tal de que
ciertamente la s pe rsonas de bie n hablan ma l de 10 1 lo vuelv a n se nsato, y a todos nosotros, ta m bién , con él.
m alv a dos. y ..i te né is mi e do vosotros, q ue so is jóvenes, há gase la e
- y tamb ién - agregó Eu tide mo- h ablan en grande prue ba co nmigo, c u a l s i fu es e un c a rio " , pues yo, que
de Jos grandes y calu rosa m ente de los acalo r a dos, ¿no ? «de m ás soy m a yo r, estoy dispue sto a correr e l riesgo y
- iYa lo c reo! - apun tó Cte s ipo-- .._y frí amente po r lo lile pongo e n ma nos de Dion isodo ro qu e es tá aq u í p resen-
m enos en e l caso de los f ríg idos , así co mo frí o lo6 co nside. n-. co mo lo harta co n la famosa Med ea de Có lq uida SIo:
ran su di s currir.
- ¡Pero tu me estás ofe nd ie ndo, Cle sipo!, e xclamó
Dionisodo ro. ¡Me es tás ofe nd ie ndo ! 11 Expresión p rov~fbial. Entre los cari os se recolectaro n ta n tos me ro
- ¡Po r Ze us!, Díonísodoro. que yo precisamente no , ,," a ri os y esclavos, q ue s us vid as e ran poco es ti ma da s. Cf. vol . 1, P'g.
-d ijo-, po rq ue te es t imo; pero te aconsejo, como ca ma. ~ bl , n. 8.
M COlq uida es la reg ión del e xt re mo es te del mar Negro , 111 s u r d e
rada, e int e nt o pe rs uad ir te, que jamá s di ga s ta n grose ra- 1". montes c lludsicos, de do nde era o rig ina r ia Medr a. Segú n la Ieye n-
m en te e n m i p resen c ia qu e quiero la muerte d e a q ue llos ti . , a l re ilresa r Medea a Yo ko -c c tud ad d e la Magnesia resali e -e-, de spués
q ue m ás a preci o. ,1.. de vo lver la ju ven tud a Esón, el pad re de s u es poso Ja són , CQnvi rtié n-
,1,,10e n un ma nce bo florecie nt e, median te s us a rtilugio s de coc ción co n
hie rb as m ' gic as, «fue al pa laci o de Pe lias y penua dió a las h ijas que d es·
l",dal a ran y cocie ra n a su pad re , prometiéndoles vo lver lo a la ju ven tud
non sus b rebaje s » (AI'O UlOORO, 1 9, 27). Pero Medea. ve ngattva rnente, no
55 La exp re sió n griega pu ede si gnifica r tanto «decir o habl ar íncc. r lllple6 en e sa o cas ión sus artificios m'gicos y Pelies no volvió a la vid a.
rr ect ementes (as l la en tiende Dionlsodoro), co mo «decir o ha blar ma l de. 1.1\ ironla a l es ta blecer la vinculaci ón con Dionisodoro eS manifi es ta; se
(as! la en tiende Ctesipo). IH Jllc·Sócra tes en sus ma nos , pe ro ¿qucrrá o sabrá Dio ~isudo ro . d espu és,
!<I elnsípldc e. El t érmino griego-q ue Se opone a l que acaba d e em . cumplir lo s ritos met a rno rfosea dc res ? Dos ob ra s pe rd Ida s, u na de Sóf o·
plear Eu tide mo -,-, C$ int encio nada me nte injurio so. d ." (El1vel1 el1 ado res) y ot ra de Eu ri pides (pelí ades) se ocupaba n deltema .
232 DI ÁLOGOS EU TI DEMO 23 3

qu e me mate, y. si quiere. que me haga coce r, o que en - Cla ro.


fi n, h a ga d e mí, s i gu sta, lo que d esee: pero que me tra nso - ¿ Pa ra deci r de cada una que es o q ue no es ?
forme e n bueno. - Pa ra deci r que es.
y Ctesipo agregó: - Si recuerdas. Ctesipo - agregó-. hace un ins tan te 286a
- Ta m bién yo , Sócrates, estoy dispu esto a po nerne en demostramos que na die d ice algo que no es ; en efecto, que-
ma nos de los e xt ra nje ro s. incluso si quieren de spellejar- dó bie n claro que nadie puede ex presar con pa labras lo
d me más a ún de lo q ue es tá n haciendo a hora. con tal de IIUC no es.
que mi pie l no te rmine s irv iendo para un od re. como In -¿ y qu é ha y co n e llo ? d ijo Ctes ipc. ¿ Va mos por eso
de M a rsi a s ~. s ino pa ra la vir tud. Si n e m ba rgo, es te Dio- Il con tradeci r nos menos t ú y yo ?
n isodoro cree que es toy e nsañado con él ; pe ro no lo es- - ¿ Nos cont ra d irla mos -a rguyó- d iciendo lo s dos el
IOy, y ú nic a me n te le con trad igo aq ue llo qu e no me pa re- e-n unciado de la m isma cos a ? ¿o, má s bien , en ese caso.
ce acer tado con r e spe cto a mI. Así, pues, mi queri d o Dio- 110 es tar ía mos di ci endo lo m ismo ?
nisodo ro - dijo-, no llam es ofende r a lo que es co nt ra- Aceptó.
decir, porque ofender es ot ra cosa bie n dife ren te. - Pe ro c ua ndo ni el uno ni el otro - an adió- d ice el b
Dioniso doro con te stó: enunciado propio de la cosa, ¿podría mos cont radec irn os ?
- ¡Ha s h a blado, Ctesipo, como s i exis tiera el co ntra- , No sucede qu e ningu no de lo s dos ha hec ho s iquie ra la
decir ! mínima mención de la cosa?
e - ¡Y por su puesto ], dijo. ¡Ya lo c reo ! ¿O ac a so t ú . Dio- Adm it ió tambi én es to,
ntsodo ro. pien sas que no e xiste el con trade ci r 04 ? - Pe ro e ntonces. ¿ nos con t radeci mos c ua ndo yo d igo
-No e res tú . en todo caso -c-rep licó-,- , quien pod ría ('1e nunci ado propio de la cosa y tú di ces o tro enu nc iado
de mos t rar q ue a lguna vez has esc uchado a dos ho mbres lit· o tra cosa ? ¿No s uc ede, e nto nces, que yo d igo la cosa
contra dici éndose recíp roc a mente. v tú, en cam bio. no di ces ab so lutamen te nad a ? ¿ Y el que
- Es cierto -c-dijo-c-, pero e n cam b io a ho ra m ismo es- 110 lo d ice. cómo po dría contradecir a l qu e lo hace 02 ?
c ucho a Ctes ipo que te está contradicien do, Dioniso- Cte sipo que dó m udo. Yo. sorpre ndido po r la a rgumen -
doro " . rac ión, exclamé: .
- ¿Y te a t reve rí as a dar razón de ell o? -¿ Qué qu ie res decir, Dionisod oro ? Ciertamente .... pe-
- Por ci erto -contestó- . m , [va yal, e ste argumento que ya he o ído ta nta s veces y e
- Pues bie n - d ijo-. ¿ hay enuncia dos pa ra referirn os II tantas pe rsonas no dej a nunca de asomb rar me . Los se-
a cada una de las co sas qu e son ?
ü pla lón n un ca menciona a Antb ten es (u ce p to en la c ircunstancia l
" Suene, rrigioque se: a trev ió a d l$3 lia r a Apolo en m ús ica . v encí- euu me racíón de los presen tes a la mu erte de SÓC rates , en F~d6" 59b3).
do po r és te, Apolo co lgó a Ma n ia s de u n alto pino y lo hizo perece r des . Si n emba rgo , e l lengua;e ma s. preciso y téc nic o q ue emp lea en es tas lí-
pell ej án do lo . Cue n ta HU ó DOTo IVII 26) que: e n Cete ne - ci u da d f rigia- ''''li S, co mo lo s tres cuos co n q ue eje mp lifica la im po sibili da d del co n-
se vela co lga d a en forma de o d re la pie l de Ma n ia s. trad ecír, coincide n exactamen te con Jos testímonjos que Alejandro de Afro-
"" ARISTÓTElES(Me/llfisicll I02 4b32 y 1o p ic:os I04b20) at rib uye a An- ,h. la nos tra ns mite sce re Anñ stenes y su te sis a l comen ta r a Ari stóteles,
n sten e s la tes is d e q ue ..no e s pos ible co nt ra decir». (Vtllse A. J . FIlSTUúl~II.~ , .Antist hen ica . , R e "u~ des scíencet oh ilos. e/ lhéol.
•, En la lectu ra sigo p a rt e de la co nje tu ra de Badh.. m y lo s u geri d o 1 1 [l932J, 345-376, reprod ucido ah o ra en r; lUde ~ de pililuwphi e grec:q"e
po r WiJamow ilz·Mo llendorff (v. en I nt ro du cción , ..No ta so b re e l texto e], Il'llrí s, 1971 , pá gs. 283-314) del mis mo autor.)
234 D IÁLOGOS E UT ID E MO 235

guido re s de Prot ágo ras lo ut iliza ba n fr ecuentemente y auu - ¿ Y quién podrla ped ir lo que no es? ¿ Tú pod ría s?
lo h ad a n otros má s a nt iguo s que e llos. A mí , e n pa r tic u - Ah...• Eu tid emo " -c-d ije -c-, estas su t ile zas. a u nq ue
la r. siem pre m e re sulta sor prenden te , porque no só lo u- est én bie n pre sen tada s. yo ya no la s compr e ndo e n fo r ma
fu ta a todos los de má s a rg ume n tos , si no q ue tam bién M" adecuada. s ino que la s capto. así. bu rda me nt e. Y a hora
refu ta a s í mi smo . '. Pienso que de ti, mejor que de nad ie. tu l vez ha ré u na pregunta demas ia do vu lgar, pero IÚ per-
pod ré sa be r la verdad. En r esumen, ¿es impos ib le e-por- dóname . Dime: si no e s posi ble e ngañarse, ni pensar lo fal- 287a
q ue a e llo va e nde reza do el argumento, ¿no?- dec ir lo Ial- so . ni se r ignoran le. ¿tampoco ex is te la posibilidad de eq ui -
so?, pues c ua ndo se habla, ¿ se dice ve rdad o no se habla ? vocarse c ua ndo se ha ce a lgo? Al re aliza r un a a cción no
Aceptó. es posible equivocarse en lo que se ha ce. ¿ No habéi s d i-
d - S i es imposible decir lo falso, ¿es, en cambio, po si. che e so vo sot ro s ?
ble pensarlo ? - Po r s u pues to - d ijo .
-Tam poc o es posible - d ijo . _ y he a q uí. en tonces -c-e gre gué-> , mi pregunta vul-
- Ento nce s -c-ag reg ué-c. ¿ no hay de ningún modo epi- ga r: si no nos eq u ivoca mos ni al ac t ua r. ni a l habl a r n i a l
nió n fa lsa ? pe nsa r, vosotros dos, ¡por zeust. si a sí son la s cosas , ¿ qué
- No - contest ó . 1I0 S habé is ve nido a en señar ? ¿ No afi rmaba is hac e
- Ni ignoranci a ni hombres ignorantes . lO qué habría poc o ·) que e rais ca paces de en se na r la virtud m ej o r q ue
de se r la ignoran c ia - si exi stiese-, sino precisamente eso : na d ie a l q ue quisiera aprenderla ?
e ngañarse so bre la s cosas? - Pe ro Sócrates -i nte rvino Dio ni sodo ro tomando la b
-Seguro - d ijo. palabr a - o ¿c hoc he a s " tú hasta e l punto de re cordar
- Pero e so no e s posible -i ns is tí. a hora lo q ue di jimos a l comienzo -y t al vez s i he d ic ho
-No - d ijo. a lgo el a ño pasado ." ahora lo recordaría s- o y, e n carn-
-c-Pe ro. Dioni sodo ro. t ú hablas por hablar. por e l pl a- bio , no sa be s q ué hacer con los argumentos q ue usamos
c e r de una pa ra d oja. ¿o en verdad c rees que no hay nin- e n este mome nto ?
gún ho mbre ign oran te ? - Po rq ue e sos argumentos son muy d ifíciles - d ije-o
e -jY bien. re fú tarnel, co ntestó. y es natural que a s¡ se a n: ¡proce de n de ho m bres d oc to s!
-c Pe ro. ¿ có mo puede se r posib le la refu taci ó n, según Tan to e s a st. a demás, que resu lt a dificilís imo sa ca r a lgú n
lo q ue sost ie nes. s i ningu no se e ng a ña ? pro ve cho de lo último q ue h a s di cho . ¿Qué quie r es decir.
- No es posi bl e - in te rru m pió Eu t ide mo. nionísodoro. co n la ex presió n _no saber q ué ha ce n ? Es e
-Ni pedí a a ho ra yo una refutación -dijo Dionisodoro. l'vide nte Que di c es que no puedo refutarlos, ¿ no es ci er-
.. En é~ta y en las lí neas an te riores, he seguido el texto es ta blec í-
el La doct ri na de l horno m ensura d e Pro tágoras ta m bién se refuta do por E. DIaS PLAcl!~( .Eu thydéme. 286e5-8 . , Mé/anges EI1lUe 'Bo i sll.cq,
a ~ ¡ mis ma, co mo lo demuestra Plat ón en Teeuuo 17I a-<:. Cue nt a DlóGE. Hruse las, 1937 , pligs. ) 13·) 16) q ue r esp.mde má s fielmen te a la t rad ición
NEs l AERCIO(II 1 35) qu e «d esea ndo Antls te nes leer en p úbl ico uno de sus man uscri ta.
esc r itos, Invitó a Plat ón a Inte rveni r, Al p reguntar le éste sob re qu é iba 6l Cf. 273dtl.9,
a lee r, Ant tst en es le co n testó que sob re la Impos ibil idad de la cont radíc- "" . Eres u n Crono s" dice el tex to. E ra u na cr;pr",sión prov erbia l pa -
ció n. Platón p reguntó; '¿ Cómo puedes esc r ibir sobre eso ?' , mostrándole rn ind icar algo pe rteneci ente a Una é poca ya pasada .
q ue e l ~ rgumen to e ra con tra dic to rio •. ., cr. 2n b l O y 273e4·5.
236 DIÁLOGOS E UT IDE M O 2.17

to ? Porque di me: ¿qué otra cosa puede sign ificar la ex pr ncs t ien e n s ignificado? ¿ Qué di ce s ? ¿ Me he eq ui vocado o
s ión ..no sé q ue hacer con estos argumentos e ? uu ? S i no m e he equ ivocado, ni s iq uie ra tú, co n to d o tu
- De lo que t ú d ices. s in e mbargo, no se r ia d ifíc il !>n eubc r , pod rás refut a rm e. ni sabrás ta mpoco q ué ha ce r co n
ca r p rove cho -respo ndió- . Así que , cont ést ame " . mi a r gu me n taci ó n; s i, e n c a m b io , m e he eq uivocado, e n-
- Prime ro t ú , Dion isodo ro - repliqué. ronces tú no te ex pr esas bie n, ya q ue sost ie ne s que es im-
- ¿ No quie re s con testar ?, d ijo . pu sib le eq u ivocarse. Y e sto no lo d igo c o n re specto d e lo ZS Sa
- Pero, ¿ac aso es justo ? 'lile afi r m a s te hace un a ño... En fin, Dioni sodoro y Eut i-
- ¡Claro q u e si !, in si sti ó. dt'lllo -ca ñe dt-c. parece q ue es te razon amient o n ue str o no
- ¿ y por qué razón? pregu nté. Evidentement e , ¿no pUl uvanza, y, más a ún , co rre el ri e sgo, co mo en e l vie jo c as o
o t ra que és t a: que h as llegado a quí , con nos ot ros, a horu. nute r-io r " de c ae rs e é l m ismo después de ha be r derr-iba-
como gr a n ex pe rto en la d isc us ión y c onoces cuá ndo 1;1: 110 a l c ont r inca nte , y para q ue e llo no suce da , ni vue st ro
d debe conte st a r y c uá ndo no ? ¿ Y en e s te m o me nto no ha. 't rie - q ue por a ña d id u ra es ta n aso m b roso por la p re ci -
de dar la m ínima r es pue sta , por q ue sa bes que no se debe ? , ¡b n e n la s pa la bras- ha sido capa z de enco n t rar un
- Pier des el rie m po en c ha rla ta ne r ías -afirmó-, en medio.
vez de co ntes tarme. H a zrne e l fav o r. q uer ido . obedece y Inte rvino Ct e sipo :
co ntésta me: a fin de c ue nt as e s tá s de acue r do en que soy - ¡Asom b rosa s , sí, son la s cosas q ue decís, hom b res de
un en ten dido. r u n os o de Ou tos. o de do nde y como os plazc a ser llama - b
- y bien, debo o be decerte ... - re spondl - ; es necesa- dlls! Por ci erto , no os preocu pa para nada el d ivaga r.
r io que lo ha ga, a l par ece r , ya que tú o rd e nas . Pre gunta , Temí yo que volviéramos a la s ofensa s e inte nté n ue-
pue s . Vilme nte calmar a Cte s ípo, d ic iénd o le:
- ¿ E s po r e l hecho d e q ue poseen un a lma por lo qu e - Cte sipo, lo que poco a ntes de cía a Clini a s 10 , te lo re -
los seres dotados de comprensión com prenden, o ta m bién pito a hor a a ti : no co noce s que e l s a be r de es tos ext ranj e-
c o m pr ende n los que no tienen a lma ? I'O S es a lgo a somb r oso. Pero ellos no han querido d arnos
- Só lo los que tienen a lm a. un a demostra ci ó n en se ri o, s ino q ue imitando a Pro-
- ¿ Sa bes tú de alguna e xp r es ión que tenga al m a? teo , e l sofista egipc io, busc an se d ucirnos co n e nc a nta-
- ¡Po r Zeus! De ni nguna. mientos 71 . Ma s imite mos nosotr os a Menelao JJ y no e
e - ¿ Y e n to nce s por qué ha ce un ins tante me pre gunta. deje mos ir a e s tos ho m b re s ha sta que no s hayan reve -
ba s por la co m p re ns ió n de m i ex p re s ió n? la do a q ue llo de lo q ue e n se ri o se o c u pan. Es to y conve n-
- ¿ Y qué o t r a c os a qu ie r e s que ha ya hecho - r e s·
pondí-. s ino e q uivocarme por imbecilid ad? ¿ O, tal vez,
no me e q ui voq ué y d ije bi e n a l a fi r mar que la s ex pres to- .., e l . 286c}.4 .
10 e f. 277d'! fro.
11 Pro leo e ra un ll d ivin ida d marin a, co noc edo ra dd porve nir. pe ro
.. Díc n íscdoru no q uiere co n tinuar la co m pro me ted ora d isc us ión '¡lIe s e resís n e a co mu n icar su sabe r a lo s hombres. Irallsfigurán oo se en
sob r e - no sa be r q u t hace n , q ue e q uiva le a _no pode r refu ta r. y bu sca Id m, d ragóll, pan te ra. [aba h, e tc.
de spla za r sobre el t érrr anc noeí n, qu e pu ed e co rre spo nde r tanto a .sig- Il Me ntl ao log ra in te r rogar a Pro teo (v. Odisea IV 465 ss .).
nificar », «te ne r se ntido » (asi la empleará Sóc rates) , como a «com p ren-
de r _, «conce bir » (a s! la u5ará Diu n isod oro).
238 IlI ÁLOGOS E UTID EM O 239

c ido de q ue nos van a ha cer ver e n e llos a lgo realmcnr nrug una utili da d podremos obte ner d e é l. ¿ O no te a c ue r-
es plend ido, un a vez q ue e m piecen a tomarse la coso ,l., , ?, dije.
se r io. Rogu émosles, p ues, Inc tt émosl es y su phqu érnos lu - Me acu e rdo m u y bien - r es pondió.
pa ra que s e nos revelen . Y me parece que yo, po r mi plI - Y ningu no de los o t ros co nocim ien tos parece tener
te, he de se r , o tra vez, q uien ha de a b r ir el cam ino rnu unhdad alguna, ni el cre m a tís t ico, ni el del méd ico, ni, en
t ráncla les con el eje m plo cómo los inci to a que se nos I eutua, ni ng ú n a iro que se pa , sí, producir a lgo, pero no
velen . Re to ma ré e l le ma dond e lo ha bía dejado 1] e Inten II .UI" , e n ca m b io , lo que pr oduc e. ¿ No es así?

d taré expo ner lo mej o r pos ib le to d o el r esto, para ve r s i lo Es tuvo de ac ue r do.


g ro provocarlos y que, pi a d osos y co m pa s ivos de mi e - Ni si h u bie ra un co noc im ien to ta l q ue h ic iera a los
fue r zo y mi se r ie dad. ta m bié n e llos em pre ndan la s COSi. l1"mbl'e s inmo rt a le s, pe ro q ue no s u pie ra de spué s ha cer b
se ria me n te. Il ~() de e sa inmo rt a lidad, t am poc o d e él re s ultar ía u t ili-
- y tú , Clin ia s - d ije-o rccuérdarnc d ónde lo ha btu ,llI d a lguna, s i deb e rnos ate ne rnos por lo m enos a la s con-
m e s dejado. Me parece q ue m á s o m enos en e st e punto I lus iones que an te s ha bí amos e stab lecido .
ha bíamos, finalm ente, a cep tado q ue era necesario filoso Es tuvi mos de a cu e rdo en t odo es to.
far, ¿ no es c ie rt o? - Nec es it a mos , por tan to, mi querido jo vencito, - d i-
- S i -e-co n tc st ó. 11·- , un co nocim ient o en e l q ue es tén r eunidos , a la vez,
- y la filoso fía e ra a dqui s ición de co no ci m ie nt o, ¿ 1l(J muto el pr oduc ir co m o el sa be r u sa r es o q ue se produce.
es as l ?, ag regué. - Eviden te m e nte - d ijo.
- S i - d ijo. - S in e mba rgo - a gre gué-, a un c ua ndo fué semos h á-
-¿ Cuál será entonc es el co nocim ie nto q ue ha da mos luh-s fabricante s de lira s, estaríam os m uy lejos de se r po-
t bi e n en adq u iri r ? ¿ No es s im ple la re spuesta ? ¿ Aq uel que sccdo res de ese co noc im ien lo q ue di jim os . Aqu í, en efec- e
nos se rv ir á? lu, aun s iendo e l mi smo e l o bj et o, d iferente e s, por un la-
- ¡Po r su p uesto !, di jo . .111, el a r te q ue p roduce y di fere nte , po r e l otro, aque l que
- ¿ Y nos se rv iría de a lgo s i su piésem os r econoc er, ye n. hace uso; d ifieren m uc ho en t r e sí, en ef e ct o, el a rte de l
do y vin iendo, en q ué lug ar de la tierr a est á se pu ltada la tille fa brica la s li ra s y el del q ue la s t oc a , ¿ no es cierto?
m a s gran de cant idad d e o ro? Admitió q ue sI.
- Tal ve z - conte s tó. - Tam poco, evidentemente, es el a r te de pro d ucir [lau-
- Pero antes - d ije-, ha bla mos demostr ado a cabada- lils el que ne ce sit amos: esr a r ta mo s e n e l mi s mo c aso q ue
men te q ue ningú n bene fici o res ulta de pose e r lodo e l o ro t'l anterio r.
del m un do, a un s i lo tuvié r amos s in fati ga y s in ex cava r Asi nt ió.
la tierra; y si ha s ta s u piésem os t ra nsfo r mar la s p ied ra s - Pe ro, ipo r los d io sesl, excla mé , s i a p re nd iésemos e l
289a e n o ro, tam poc o de na da se n irí a se m eja n te conocim ien . .ut c de hace r d iscu rsos, ¿no se r ía ac a so ése el que ten dría-
to . Pu es s i no sabemos hacer u so dc l oro, quedó cl aro q ue 1I10 S q ue a dq u ir ir pa ra se r feli ce s ?
- Yo c r eo q ue no - co nt estó Clinias .
- ¿ De qué prueba te vale s P, pr e gun té. d
u cr. 282e6.
240 DIÁ l.OGOS EUT IDEMO 24 1
- Yo veo - dijo- que a lgu nos a u tores de d isc u rsos tll - La es trate gia - respondí-; me parece que es, m ás b
s a ben ha ce r uso de lo s propios d isc ursos q ue ellos 01 1 uuc ningú n o t ro, aquel que s i un o [o pose e es feliz.
m os prepara n, a l ig ual qu e los fa b ri ca ntes de Jir as no 11I - A mi no m e pare ce.
ben ha cer us o de e llas; y ta mbién s ucede a q ui qu e a lma, - ¿ Po r q ué ?, le preg un te .
en ca mbio, so n capaces de hace r u so de los discu r so s q u. - Po rq ue ése es , e n reali dad, un arte de cazar ho m bre s.
a q ué llo s h icieron, pe ro son incapaces de esc ri bir los. F - ¿ y qu é P, dije.
evide nt e, pues , qu e, as im is mo, co n respecto de los di sc ur - Ningu na de las a r tes re lativa a la caza - respond ió-
sos , un a cosa es e l a r te qu e produce y otra, difere nte. el \ n más a llá de caza r o ca pt u ra r " , y una vez q ue la ge n-
qu e hace uso. 11' ha ca pt ur a do lo q ue e ra objeto de s u caza, no sa be q ué
-Me parece - dije- qu e no s da s una prue ba sari sta c m il hacer de é l. Ta nto es as¡ que los caza do r es y pescado-
toria de qu e no es just a m e nte es te arte de componer di . Il' ~ e ntregan sus presas a los coci neros, y, a su vez, los geó-
c u rsos aqué l c uya poses ión pod ria a uno hacer feliz . Y, nu-tres. astróno mos y m ae st ro s de cálculo -pue s tam bién e
sin e m bargo. yo c reía que e n él. con tod a probabilidad. (' 110 5 so n ca za do r es, ya que, en efecto, no producen s us fi-
t te n ia que ha bér seno s reve la do ese conocim iento q ue ha auras, sino qu e se lim ita n a encontrar las que existen-c.
ce tiempo andamos b uscan do, porque, en efec to , esto, rruno ta m poco sa be n qué us o hacer de ellas, s ino s ólo ca-
ho mb r es , los que ha cen discu rsos. cuando me en cuentro IlIrlas, e ntregan 10 que han ha llado a los dialéctico s " pa-
co n ellos, Clinias, m e re sul ta n extr ao rdina ri a m ente sa btos r 11 q ue Jo u t ilic e n. Por lo menos , así proceden quienes, de
. y s u a r te m a r avilloso y s ub lim e. Por lo demás, no ha y de ent re es tos últimos, no han perdido po r complet o la
qu é asombra r se: sem ej a nt e arte es, s i b ien peq ueño, s610 ro beza.
una parte del a rte de los enc a nta m ie ntos. aunque infe r ior - ¡Muy bien, mi q ue r idís im o e inteligentf simo CJinias!,
290a a é l. El de los e nc a ntam ie nto s, e n efecto, consist e en en- e xcla m é. ¿ Y es r ea lm ente así la cosa ?
ca nta r se rp ie nt es 1', ta r ántu la s, escorpio ne s y o t ras be s. - ¡Po r s upues to ! Y lo m ismo va le con los es tra te gas
t ia s y en c u ra r e nfe r meda des , m ient r as que ést e pe r-sigue dij o-e, que. c ua ndo ha n tomado una ciudad o un ejercí-
el e nca nta m ie nt o y pers uasión de los m iem bros de un ju - 111. los co nfia n a los hombres de es tado - ya que e llos , por d
rada , una asamblea o c ua lq uie r otro t ipo de gente re- . 1, no sa ben qué uso ha ce r de lo que han c a pt ur ado-c . as í
u ni da ". ¿ O te pa rece a t i de o tro m odo ?, dije. corno los ca zado res de codornices entregan las p resa s a
-¡ No! , e xcl a mó, me parece q ue es como t ú dice s. los q ue se ded ican a s u c rta 11. De modo p ues -cc c nu-
- y e nto nces -pr os e gul- , ¿a dó nde nos he mo s de di. Il UÚ - , que s i necesitamos un a rte q ue se pa tam bién ha-
r igir ? ¿ A qu é o t ro a rte?
- Yo no sé dónde - d ijo . la Es deci r, no p rod uce el objeto . qu e era uno d e los re q uisitos del
Yo c reo, en ca m bio, qu e lo he encontrado - d ije. lcnoc tmíe n to buscado (c f. 21l9l?5-6).
17 No de signa aqu l, como en Menón (75d) a l qu e sa be co nduc ir hilo.
-¿ Cuál es ?, pr eguntó Clini as . htlme nte una d is cusión, s ino que tiene el signi ficado pla tónico fuerte de
IlIúl ofo , e l q ue es ca pa z de a pre hen de r los p ri nci pios (d. Repúblic/l. S33b
10 Los gri ego s conoc ían a 10 5 encanta dores de se rpien tes (cf. Repú · V II .).
blica 358b 3). l. La crla de codorn ices pa ra some terl as a co mpete ncias entre ellas
n Cf. P ro l dgo ras 3 15a8·9, para la vincu la ción d el arte de co mp oner Ir hab la vue lto en tonces , en Atenas , c as i una ve rdad era manta (d . Leyu
disc ursos con e l d e Jos enca ntamie ntos . ·/ K'Ih·c y Alc íbtodes ¡ 120a ).
~I - 16
242 [lIÁLOGOS E UTIDEMO 243

ce r us o del obje to q ue ha adq uir ido, por habe rl o produc t 1'11 r-l pu nto de partid a de nuestra indagación y en la s mis - e
d o o po r h a b e r lo c a za d o, y s i só lo u n arte t a l no s h a n'! 11 cond ici ones qu e al principi o de nu estra búsqu eda .
III Il !'o
c hosos. e ntonces el qu e bu scamos -concl u yó- no s('rt C RIT. - ¿Cómo os s ucedi ó eso, Sócra te s ?
el a rt e del es t ra te go, s ino ot ro. Soc. - Te lo e xplica ré. Creímo s qu e la polit ica y e l a r-
e CRIT. - ¿Qué es tá s di cie ndo, S óc rates ? ¿ Ese joven hu h ' regio " e ra n lo m ismo .
bló asi? C RIT. - ¿ Y e nto nces ?
Soc . - ¿ No lo c rees, Cr itó n ? Soc. _ Cre ímos que ta nto el a rte del es t ra te go como
CRIT. - ¡Po r Zeus q ue no! Pues e n mi opinión. si "al I ll ~ ot ros e ntregaban a ése el manejo de los p rod uc tos. de
da de ra mente pronunció esas pa labras. no tien e él ncce I 1Il!lc ua les ellos mis mo s son lo s artesanos. como s i fu ese
da d pa ra s u educación n i de Eutide mo ni de ning ún ou« ..lúuicc qu e sabe u til iza r los. De modo qu e nos pa recfa cla-
Scc. - Ento nces...• ¿ ha brá s ido, ¡por Zeus l, Ctesipo el I U qu e e ra ése el q ue bu scábamos. el que es ca usa del bie -
qu e la s d ijo y yo no me ac uerdo bien ? in-s ta r del Est ado. y q ue. precisament e. él solo. al deci r
29 1a CRIT. - ¡Pero de que Cte si po me h ab la s! tlr-l ya m bo de Esquilo " , es tá sen tado ee n la popa de la d
Scc. - Po r lo me nos es toy segu ro d e est o: ni Euti d 'llulad _. gobe rnándo lo todo y dirigién dolo t odo p ara qu e
mo ni Dioni sodorc dije ron es as pa labras. ¿ Ha b rá sídc. nu III, lu se a úti l.
bienaven tu rado Cr itón, algú n ser s uperior " , allí presen CJt.IT. - ¿Y no os pa reci ó bien, Sóc rat es ?
le. qu ien la s pr onunció? Porque . en efecto. yo las esc u SOC. - Lo j uzga rás t ú mi sm o . Crt t ón, s i qu ieres escu-
ch é...• es toy seg u ro . 1 hilr lo que nos sucedió a co nti nuación. Comenzamos de
CIl.IT. - Sí. ¡por Ze us l, Sócra te s, c reo que pu do habe r 1I\lt· VO n ues t ro e xamen má s o menos así : _Y bien . es te a r o
sido algu no de los se res super iores... iY muy supe rior! Aho 1(' regio. qu e t od o lo di ri ge, ¿ nos p roduce a lgún resu lta-
ra bie n. después de eso. ¿c ont in uast eis e n la bú squeda I 1"" o no ?_ _S in du da - nos dij imos el uno a l otro-e .e ¿N o e
¿ En cont rast ei s e l a r te qu e b usca bai s o no lo e ncon res pondertas eso t a m bién t ú . Cr itón ?
tras tet s ? C RIT. - S i.
b Soc . - ¿ y dónde e ncont rarl o...•que rido ? Éra mo s mlb Soc . - ¿ y c uál dirías que es s u resultado ? Por eje m-
bien ridícu los: co mo los c hiq uillos pe rsigu iendo alond ra•. plo. s i yo te pregu nt as e qué re sultado produce la medici-
Crelamos a cada mom e n to es ta r a pu nto de afe rrar unn 11l1, al dirigir todas la s cosas qu e de penden de e lla. ¿ no
de esos conocimien tos y sie m pre. s in emba rgo . se nos es. lile cont es t ad as que e s la sal ud ?
ca bullía. ¿ Pa ra q ué re pe t ir te la s m uc has cosa s que se di. C RIT. - S í.
je ron? Arriba mos. po r últ imo. al a rt e regio '" y e xa mina n- Soc. - y a propó s ito de tu a rte. la agricultu ra '1, que
do lo a fondo. pa ra ve r si e ra aquel que produce la Fellci. di r ige todo lo que le concie rn e. ¿qué re sult ado prod uce ?
da d. he aq uí que. como s i hubiésemos caído e n un labc- , No me vas a de cir que produce el ali mento que surge de 292a
ri nto, c reye ndo que h abíamos alcanzado su fin, nos halla- In tierra ?
mas, e n ca m b io, después de haber da do una vuelta pa ra
no llevárnos lo por de la nt e. con que es tábamos de nuevo " Po sible a lu si6n a Pr otágora s . el. Protdgoros 3 181'5 s s.
01 Los~ ie re eo'l rro Tebos, vv. 2 y 760·l.
l~ Algu n a dlvmid ad o datmon. Cl'. Sofista 2 16b4 . Sl Se de spren de, pue s, qu e Cr it6 n pos eía o , po r lo me no s, t ra baja-
so e l. Pulüico 259b l ss . 1011 ca m po s . Má s adela nte se hab la de s us n egoci os (30 4c).
244 DIÁl.OGOS E UT IDE MO 245

Carr . - ¡Claro q ue sí! UlllKllll co noc im ie nto que no sea o tro qu e el p ro pio. ¿ S e-
S OC . - ¡Ah... ! En tonc e s e l arte r egio, que dirige tUl 1I: 1IlU S ca paces de deci r, en fin. cu á l es y qu é uso pode mos
lo que le conci e r ne. ¿qué p rod uce... ? Ta l vez no te es lA hllt't' r de é l? ¿Quie r es que d igam os, Critón, qu e es aq uel
r esponde r. • un el q ue ha ce mos bue no s a los demás ?
CRIT. - ¡Po r Zeus ], q ue no , Sócrates. CRIT. - De acuerdo.
SOC. - y ta m poc o Jo e ra para noso tros, Cn t ón. l' SOCo_ ¿ Pe ro con r especto a qu é se rá n bu e no s pa r a no-
po r lo me nos es to tú lo s a bes: s i es e l que bu scamos. n . "lros? ¿Co n respec to a qu é serán útiles para nosotros ?
cesaria me nte nene q ue se r a lgo ú ti l. , 11tend remos q ue deci r todavía que hará bu e nos a a iras,
(RIT. - Por su pues to. v es tos otros, a su vez, a o t r os"'? En s u ma, con r espec to e
Soc . - ¿ y debe. po r lo tanto , o frec e m os a lgún bh-n 'Illllé han de se r bue nos , no lo vemos po r ningún la do, des-
Cert . - Necesa riamen te, Sócrates. .1.' e] m o me nto qu e he mos desa c redit ado los q ue se s ue-
b SOC. - Un bien q ue, segú n convini mos Cltntas y yo h 1"11 deci r q ue son los resultados de la po ltrica. No no s ca-
ce poco, no pue de se r ot ra cosa qu e un cierto con ocí 111: sino re petir literalmente e l proverbio ..Corinto, hijo de
miento. I I"II S _ as, y, como dec ta, estamos ta n lejos co mo al prtnc t-
CRIT. - Así hab éis d icho. pl ll , o más aún, de saber cuál es ese conocim ien to que po-
Soc . - Por lo tan to , esos o tros resultados. que se pu ll! ó bri nda rnos la felici dad.
dría decir propios de la política -y qu e se rían m uc hos. CIUT , - jPor zeust . Sócrates, parece q ue os habí ai s me -
como, por eje m p lo. log r a r que los ci uda danos fue sen ri ndo e n un bonito a tolladero.
co s, lib res y pa cífícos-c-, Iodos e llos. di go, ya se ha mos Soc. _ Así es, Crit ón. y hast a yo m ism o, cua ndo m e vi 293a
l rado q ue no son ni buenos n i malos; en cam bio, e ra me «uupado e n se mejan te a tollade r o, pedí a g ritos la a yuda
nest e r q ue es te arte h ici ese sabios a los ciudadanos y I lr los ex tra njeros, inv ocándolo s como si fu e ran Dioscu-
partíci pes de l conoc im ie nto. s i en efecto quería co nver I U " .., pa ra qu e no s sa lva ran , a m í y a mi joven co m pa ñe-
e t irse e n el ú nico arte q ue, s iendo út il, b ri nda se además IU , de esa terce r a oleada del argum e nto, y se esfo rza ran
feli ci dad . po r tod os los me dios e n demost rarnos s e ria me nte c uá l es
C1U T . - Eso es . Po r lo menos así h a bía is q uedado de "'l" co nocim iento con c uya po se sió n pod ía mos tra nscurrir
a c uerdo, segú n lo que nos ha refe rido. hieu el rest o de la vida.
SOC. - ¿ Pe ro ha ce en ve rdad el a rte regio sa bios y bu CRIT. - ¿ Y... ? ¿ Os lo qu iso de mos t r a r Eut ide mo ?
nos a lo s ho m bres? Soc . _ ¿ Y c ó mo no ? Co me nzó, a de más , mi a mi go , co n
O UT. - ¿ Y po r q ué no , Sóc rates ? li tre d~m b re m uy super io r a h abl ar así:
SOc o- ¿ Pero a to do s Jos hace bue nos, y en todo... ? ¿ Y
". Cual ~¡ fuese una tra ns misió n de bon dad de los un o s a lo s o tro s
ese arte e nseña c ua lquie r t ipo de co noc im ie nto, el del za-
' '' IllU re su lt a do de la política.
pate ro , e l del carpi nt ero y todos los de más? 11 Dich o qu e se a plicaba a todo ti po de vana repetición. Un esco lio
CRIT. - No creo, Sócrates. ,, 1 d iálo go (G, CIl. GRHENE, S ch olia P/a/Onica, Amer . Philo l. Asscc ., 1938,
d Soc . - Entonces, ¿q ué co noc imiento nos da? ¿Qué uso I "\ ~ ' 123) e xplica s u ori gen en la inca nsable re iter aci ó n ue la Irase po r
haremos de é l? No debe prod ucir ninguno de los resulta . 1"'1'1" de cierto embajado r de Corin to enviado a Mega ra. .
•• Los Dioscuros, Cás to r y Pólux, eran d ivin idad es protecto ras rn-
dos qu e no so n ni malos n i bue nos, ni debe sumini strar vocudas , particu larme nte, por los m arinos e n momen to s de pel igro .
246 DIÁLOGOS E UTIt> EMO 247

b - ¡Oh Sóc ratesl. este co noc imiento acerca del cun l h • 1 f' ~ y. po r e l o t ro . en cam bi o, no lo e res. y a l mi smo t tc m-
ce un bu en r at o que a ndá is en dificultades - dijo-. ¿ti 1''' ,.,. co n re spe c to a lo mi s mo u . d
ba e nseñá rtelo o bien de most rar te qu e ya lo posees ? _ Ad m itá moslo. Eutide mo -c- r espond í->, porque. co mo
- ¡Dic hos o de t i, Eut id em o!, ex clamé. ¿Eres capaz I ~" U e l prov e r bio, _to do lo q ue tú di ga s está s ie m p re bien
e llo ? .1 1. hu _" , Pero. ¿ cómo se q ue poseo ese conocimi ento qu e
- ¡Por s upuestol , conte stó. l,m nlnlOs ? Pues to q ue es imposible q ue un a mi sma cosa
- E nto nces, dem uestrame, ¡po r Zeus!, que ya lo pose U Il y no sea, si conozco una cosa, la s cono zco to da s - en

Pa ra un ho m b re de mi edad. eso e s m ucho m á s fá cil qu uh-c to , no podría a l m ismo tiempo se r a lgui en q ue cana -
a prenderlo. , " Y a lgu ien que no co noce-e: y pue sto que la s cono zco
-c-veamos. pue s -dijo-; cont éstame: ¿ ha y a lgo qu rodus, poseo ta m bié n ese co nocim ient o. ¿No e s es to lo que
co noces? qu ieres d ec ir . y no co ns is te e n e llo tu sa gaz arg umento ?
- Po r c ierto -dije-o m uc has cosas, a unque de pou - ¡Pe ro tú mi smo t e es tás evident em ente refutand o. Só- e
m ont a. 1 uucal, d ijo.

- Es suficiente -dijo-. ¿Crees que es posible que un_ - ¿ Qué ? ¿ Aca so no e st ás tú tambié n. Eutidemo. e n la
e cosa qu e es no se a aquello que es ? . misma situa ción? a gregué. Po rque yo personal m ente.
- No, ¡po r Zeus ! mtcntras me en c uent r e con tigo y con e st e Dionisodo ro,
-Enton ces - ag regó- , ¿tu co noc es a lgo? men te d ilecta 'JII, sea cual fuere la suerte que co r ra . no me
- S i. lu- de quejar de ell a en a bsol uto. Per o. dime: ¿ no e s cierto
- Y s i conoces al go. ¿eres a lgu ien q ue conoce U? que vosotros a lgu nas c os as las conocéi s. y ot ra s , no ?
- Por cierto - dije- o conozco precisamente eso. - De n ingu na mane r a , S ócrate s -dijo Dionisodoro.
- No im po r ta . Pe ro, ¿ no es in ev itable co nclu ir que t u -¿ Que q ue réis dec ir-P. pregunté . ¿ Ento nc es no con o-
c o noces todo, s i er es u n co noced o r ? réts nada ?
-¡Por Zeus!, no - d ije yo-, pues hay m uchas casal - Al con t ra r io - d ijo.
que yo no co no zco. - ¿ Ento nc es conocéis to das -c-eg regu é-c-, pue s to q ue 294a
-c-En ton ce s , s i hay a lgo que tú no co noces. tú no e res conoc éis a lgu na?
un c o nocedo r. - To das - di jo-. y también tú . pue s s i conoce s por lo
- No lo soy de es a cos a e n part icu la r. que rido -le menos u na. cono ces toda s.
co nt e sté . - ¡Oh zeust. d ije . iQué a somb roso ! ¡Que ma r a vill a he-
- ¿ Y es po r e so m eno s cier to - d ijo- que tú no e re s 1II0S ha llado ! ¿Y ta m bié n todos los otros hom b re s co no-
un c o nocedor ? Ha ce un in s ta nte decí as que era s un con o- ce n todo .... o no conocen na da?
ce do r. Asl su ce de q ue t ú m ismo, po r un la do. eres lo que
11 Es decir . al conoc imiento. Adviér tase q ue és ta e s una formulaclón
11 La fa lacia qu e se p rep a ra eq u¡ es tá ba sa d a en el equIvoco es ta. mu y p reci sa del princ ipio de no cou tra d icción. (Compárese co n Rtpúbli·
ble cl do por Eu ti de mo en tre una noci ón rel at iva y otra abso luta; el des- n~ 436b 8·437a9.)
pl aza miento s ignificativo se da entre «co noc er a lgo> y <alguie n que co- 19 El nú cle o del pro ver bio es k alá pánla «tod as las co sa s se n
t){}ce _ o ecc nc ce dor , (entendiendo qu e cono ce todo) . Para el res to del ar- Ilermosas >,
gum ento , v<!ase n. 32. "" Exp res ión homé rica (JIlada VIlI 28 1).
E UT IDEMO 249
248 D IÁLOGOS

- Es claro que no puede se r - respondió- qu e con pero. pe nsando que se estaban burlando de ellos. no d
can a lgu nas ce sa s y no conozcan ot ras, y que sea n al n .' epta r on somete rse a la prue ba ti. como tampoco deja-
mo ti em po conocedores y no conoc edores. tun de repetir, e n ocasión de cada pregu nta de Ctesi po,
-¿ Y e nto nces qué ? d ije yo. llll e' ellos conocí an tod as las cosas. Cteslpc, e n efecto. s in
- Todos conocen todo - d ijo-, con tal de que conu ningún t ipo de rese r vas. term inó haciéndoles cua lquie r
ca n una sola cosa. I' lt'gu nta . au n las má s Indecorosas. pa ra ve r s i las cono-
b - ¡En el nombre de los díoses l. exclamé. Y me eX I" rlan. Y ellos, impertérritos, la s enfrentaban 9\ convencí-
so as í, Dioni sodoro , porque es eviden te que ya es tá is ]JI Illls de su sab e r, como jab alíes que se la nza n a reci b ir el
cediendo se ria me n te. co sa que no s in d ific ultades he I Il ulpe, al punto que ha sta yo mismo, Cr itón, me vi forza-
grado que hicie ra is. Vosotros dos. ¿conocéis realmente Iv ,11) por la in c redu lid ad a pregu nt a rl e, fina lmente. a E utí-
do... ? Po r ej emplo, el arte del ca rp inte ro y del za pa te ro , ICIIlO s i Dionisodo ro sabía tambié n dan zar. y es te ú ltimo e
- Por su puesto -con testó. lil e' contes t ó: «por s u puesto ».
-¿ Y sois ca paces tam bién de re menda r los za pa loa) - Pe r o no cie rt a me nte - d ije- a sa lta r sob re la s es-
- Sí, ¡po r Ze us !, y tam bién de pone rles suelas. pudas ni a girar sob re una rueda 90 . a tu edad . ¿No ha-
-¿ y también sabéis cosa s de esta índole, como cuá n hrás ido tan lejos con t u saber?
las so n las estrellas y los granos de arena ? -No ha y nada que no conoz ca _ respondió.
- Por s u puesto - d ijo- , ¿o crees que no ha bría moa _ y - dije- ¿conof;:éis tod o a hora o lo habé is conoc í-
contesta do que si? 1111 s ie m pre ?
Ctesipo to mó la pal a b ra. - S ie m pre - me respond ió.
e - ¡Por Ze usj , Dioni sodoro - d ijo-, dame al gu na prue- _¿ Ta m bié n c ua ndo erais niño sy recié n n acidos ceno-
ba de esto pa ra qu e pueda pe rsuadirme de que am bos, d ai s todo?
efect ivamente, decís la ve rdad. Amb os dije ron qu e si al mi s mo tiempo .
-¿Cuál te he de dar?, d ijo . A nosotros. s in em bargo, la cosa nos parecía in creíble. 29Sa
-¿ Sabes tú cuán tos dientes t ie ne Eu tidemo y sabe éso Eu tide mo, entonces, dijo:
t e c uán tos ti enes tu ~I? -¿ No lo c rees. Sóc rates ?
-¿ No te bast a - d ijo- h ab er-oído que nosot ros cono- - No. Sólo q ue - agregué- pa rece que vosot ros sois
cemos todo ? sa bios.
- No me digas eso - con test &-, s ino dad respue sta só- -Si e st á s di spues to a contestar mis pregunta s -di·
lo a la pregunta y demost radnos ambos que dec ís la ve r- jo-. me encargaré de dem ost ra rte que t a mb ién tú re-
dad. Si no s decís, pues, cada un o de vosotros cuántos di en- conoce r ás e n ti mi sm o este asombroso conocimiento.
tes tiene el otro y e videnciáis . ast, conoc e r los - nosot ros
los com p robaremos luego cont ándolos-e, entonce s os cree- ,
remos ta m bié n acerca de la s de má s cosas. 91 Siempre ev itab an lo s u tra nje ros sa li r d e u n plano p urame n te
ve rba l.
9l Expresión homé rica (illa d ll XIII 337).
91 Lo s d os sofis tas e ra n viejo s (d . 272b9) Ys us d ientes, segura men- 9< Pa ra esto s eje rcic ios de acrobacia, véase JI!NUFONTI!, Bllrlquele n
te, no mu y nume ro sos. 11 y VIl 2-3.
250 DI ÁLOGO S E U TIDE MO 251

- Nada me ag radada tan to - repus e- como verm ' 1 Me d i c uent a enton ces de que es taba fastidi ado con- d
fu ta do e n es to. Porque s i hasta a ho ra no m e he da do e l! 111 11111po r las ob se rvaciones q ue hacía a sus p reg un ta s,
la de ser sa bio. y tú me va s a dem ostrar que con01CCJ I ruh-ntras que él qu eda a traparme envol vié ndome e n las
do. y que s ie mp re he conocido. ¿q ué mayor prodigio q '¡ '¡les de s us palabras. Y me acorde de Con o " , q ue ta m-
ést e podría e nc ontra r yo en tod a m i vida ? Itlc' n se fa s t id ia ba conm igo c ua ndo yo me e mpecina ba , y
- Contésta me. pues -dijo. d¡' , pués se ocupaba menos de mí, conside rá ndome inca-
b -c-Inte rrógame. q ue le responderé. PM de aprender; y puest o que había dec idido f recuentar
- Pue s bien. SÓC rates - dijo-. ¿e res tú conocedo r ti uuu bi én las lecciones de este hombre , me pareci ó conve-
algo. o no ? un-me ceder, no fue ra que, juzgándome un torpe, se ne-
- Si. alllra a acepta r me . De mod o. pues, qu e le dije:
- ¿ Yeso por lo c ual e res un co noc ed o r, e s e so m ism - Si te pa rece que ha y q ue proceder así, Eu tidemo , que e
por lo c ual ta m bién conoces, o co noces por m edio de otra 11,1 se proceda; tú sabes d isc u tir m ejor que yo, que soy un
co sa? profano e n este a rt e. Pregunt a, pues , de nuevo, de sde el
- E s eso mi smo por lo cual soy un conocedor. Creo qu 1 .unienzo. .
te refi e res a l alma. iO no estás hablando de ella ? _ y tu cont ést ame, de n uevo, desde el comienzo -dijo .
- ¿N o te da ve r güe nza. Sócrates ?, exclamó. Siendo tu , Cu noces lo que conoces por medio de al go, o no ?
el interrogado, te a treves a preguntar. - Si -dije- . po r medio de l alm a.
-Es cier to-d ije-, pero, ¿cómo de bo ha cer? Yo pro- - ¡Ot ra vez éste me contesta más de lo que se le pre- 296.1
ce de ré t al com o tú ordenes. Pero cuando no se lo que prc lIullta ! ¡Yo no te pregunto por medio de qué cosa, s ino si
gu n t as, ¿me o rdenas entonce s que conteste igualmen te sin ~ u noces por medi o d e algo!
qu e te pida e xp licación? - Con tes t é mas de lo q ue debía - dije- , por ignoran-
e - Sí tú compre nd es de a lgún modo lo que d igo - afir. da. Discú lpame. Te res ponderé ahora con tod a s im p lici-
mó . da d, que conozco lo que co nozco por medi o de a lgo ,
-Si - respondl. _¿ y - pregu ntó- s ie m p re por medio de eso mismo
- y bie n. con t és ta me entonces según lo q ue como u, a veces, por medio de eso y, a veces, por medio de ot ro ?
pre nde s. - S ie m p re, c ua nd o conozco " - d ije-, es por med io
¿Cómo ? - d ije- oS i tú me pregun ta s pe nsando e n una de eso.
cosa y yo por mi parte com prendo o tra y, despué s, te con- - ¿ Pe ro no te rm inarás nunca -exclamó- de hace r
te s to según lo qu e com prend í, ¿ te es suficien te que yo no ugregados?
le re sponda na da de la cues tió n? - Temo que este "s iem p re » no s enga ñe,
- A mí, sí - dijo- , pe ro a ti no, me p arece. - No a nosotros - repu so-; e n t odo ca so, a t i. Vuelvo b
- Yo, ¡por Zeus! - afir mé-, no contestaré si a ntes no a pregun ta r te: ¿conoce s sie m pre por medio de eso ?
he acla rad o la pregunta.
- Es que t ampoco contestarás nunca a lo que c rees ha -
ber entendido, porque pie rdes el tiempo en charlatanerías '5 el. 272c2 ,
,. Los . a gregad os_ o precisiones que in te rc a la SÓCrllles son, ju st a-
y e res más viejo de lo debido, Inente , aq ue llo s q ue ha cen eviden te la falacia.
252 D IÁLOGOS EU T )[)EM O 253

- Siempre - di je- oya que hay que quitar ele cuandu _ Y, ¡por zeust. tú s ie m pr e -c-agregó-c , conocerás , y
- Co noces. enton ces, siempre por medio de eso. Y ,,,ntlc c r ás la to ta lida d de las cosas, si as! yo lo q u iero " .
siem pre conoces, ¿conoces algu na s cosas por medio de - iOja lá lo quie ras - respond l- , venerad o Eutidem o !,
por lo q ue conoces y o tras por m ed io d e o tra cosa, o t a l re almen te d ice s la ve r dad. Pe ro no co nflo del todo en
da s por m edio de eso? 'IIU: sea s capaz de e llo, a m enos que se u na a t u Que r e r
- Todas ~1 por medio de eso -dije yo--, las r l tic tu her m ano Dion ísodoro, aqul p re sente; a s¡ ta l vez e
con ozco. pudrfa s ... Pe ro, d eci drn e tos dos -ag reg ué-: co n r e s pec -
- ¡Ahí es tá - excl a m6- otra vez el agregado! 111 tic ot r a s cosa s no sa brí a en e fe cto có m o d isputar con
- Está bien - afi r mé- , quita ré «Ias que conozc o s. v»sotros - h om bres de t an prodigioso sa ber - , p a r a de-
- No ha c e fa lt a q ue qui te s na da . No te e stoy pídíend mos trar q ue no co no zco todo, de sde e l momento que vo-
e ningún fav o r. S610 co ntéstame e s to: ¿se rí as ca paz de ( 11 ~ lI l ro s afir m á is que s i lo co no zco; pero, cosas co m o éstas,
ncce r la tota lida d , s i no conoc ieses loda s las cosas? nuude mo, por ejem p lo, que «los ho mbre s buenos so n ln-
- Seria un portento -repuse. JU. 105 _, ¿cómo pued o pretender yo conocerlas? Dim e , por
y él dijo: lnvor, ¿la s conozco o no la s co nozco?
- Agrega entonces ahora lo que quieras. pues ya hlll - Po r cierto q ue las conoces - r e s po nd ió.
adm itido q ue co noces la tota lidad - , - ¿ Conozco qué... ?, exclamé.
- Asl pa r ece -e-d rje-c-, por q ue s i el agregado «las qu - Que los b uenos no so n inj us tos.
conozco . no tiene n ingún va lo r. ento nces yo conozco - De sde luego, e so ya lo se -dije- , y ha ce rato. Pe ro 297a
to da s. 1111 es lo q ue t e pregunto, sino dónde a prend í yo q ue «los

- y ta m bién ha s a dm itido q ue conoc es s ie m pre por buenos so r! Inju stos ».


med io de eso por lo que co noces, se a «c ua ndo conoc es». - En ningún la do -intervino Dlon lsodoro.
s ea de c ualq u ier o tra manera que te plazca, pue s ha s ad - - Ent once s e sto es algo que no sé - d ije.
mitido que co noces siem pre y todo a la vez. Es , por ta nt o, - ¡Ten c u ida do - d ijo Euti de m o dirigiéndos e a
e~ i d ent e q ue t a m bién s ie nd o n iño co nocía s, y c uando na. Ilioniso do r o-, m e ec has a pe r de r e l a rg um ento !, porque
d c rste y c ua ndo fuiste e nge nd r a do; y ha sta a n te s de se r tú 1I ~ 1 re s ult a rá q ue é l no conoce, y e nto nces que es, a l mi s-
m ismo ge nerado, y de q ue lo fu e r an el c ielo y la tie rra, 11I0 t iempo. u n conocedo r y un no conocedor.

conocías lodo, si e s cierto que s iem pr e conoces. Dionisodor o se rubori zó.


- ¿Que es tás d iciendo, Eutidemo ?, pre gunté. ¿ No te pa- b
f7 El sofi sma 5<: basa en el significado d e .todo. ( = «todas la s ca- rece correcto lo que afirma tu hermano, que lo s abe todo?
sas~ , ¡ui"ld~ S6c ra lel a ela a que por .lOdo. entiende todo 10que co noce;
Euti de mo p res upo ne. en ca mb io, lodo 10 que es posible conoce r. frent e
a la s re~ros d e Sóc ra les, recu rre a la fórmu la c se rlas ca pa,; de conoce r " Es decir; delllrgumen tllr de Eutidemo d epende q ue S6cfllles co-
la to tali d ad (ápa n ta ). , pa ra bu sca r e l m ism o eq u ivoco. nOlca . Debe señalarse, a de mb, q ue IlIS pa la bras a qu l pronunci a da s. por
.. El sofis n:'a se red u ce a la s sig u ien les pro posiciones; no se p uede Eu tid emo so n las q ue más se a proxi man a l. teais q ue Pla tÓn a lrib uye
c.o noce r la tot ali d a d (como un lodo globa l) sin co noc e r lodo (como plu ra - 11 I:u ti de mo -c-supone mo s que se tra ta de la m i.ma person a Iv. n. 6 )-- en
l ~dad d e ~a rtes). Sócrates . a l con te sta r negat iva me n te la p regunta a n te- e l Crát ilo 386d3 ss. La tes ts, qu e no figu ra en nuestro di á lo go , es la s i-
r rc r, admIte conoc e r la to ta lida d y, por lo ta n to , co noce también la s par. Ku ie n te: e tc da s la s cos as se co rre 5po nde n co n to das la s cosas s ie mp re
te s, o sea. todo. y a la veZo.
254 OI,(LOGO S EUTIDEMO 255

-¿ He r m a no ... ? ¿ lo s oy aca so de Eutidemo ?, se apre- gunrarme - es toy seguro- por la envid ia , y ~ o n el pr opó-
su ró a decir Dionisodoro. s ito de imp edir qu e Eut id e mo pueda ense na rrne aq ue l
En ton ce s yo repu se: sa be r.
-Dej e mo s eso, querido. hast a qu e Eu tidemo me ha ya - Respo nde . pu es - dijo.
e nseña d o q ue co nozco q ue Jos ho m bre s buenos son inj us- _ Respon do _contesté_ que Yolao e ra sob r ino de He-
tos...• y no me pri ves de esa ens eñ a nza. racles. pe ro mío, po r lo qu e me parece, de ni ngún modo.
- ¡Huye s. Sócrates}, excl a mó Diont sodoro, y no qu ie- En efec to, su padre no era Pan- ocl e s . m i he rma no, s ino e
res responder. Hieles, e l herman o de He ra c les , y qu e só lo se a se mej a u n
-Naturalme nte -dije-, si soy mas débil que uno poco e n el nombre.
so lo de vosotro s, ¿cómo no voy a huir frente a do s _¿ y Pa t roc les es tu he rmano >. d ijo é l.
e juntos lOO? Muy lejos estoy. a demás. de valer lo que He ra. - Po r cierto -contesté-, tene mos la mi sm a ma-
eles, que no pudo, a un t iempo, lu char con t ra la Hidra d re '05, a unque no el mismo padre.
-una sofista femenina que. gracias a su sab er, si al. - En tonc es es tu her ma no y no es tu herm an o.
guien le cortaba una cabeza de s u argumento, haci a brc- -Querido... -dije-, no lo es por par te de pad re ; el de
la r m uchas o tras en luga r de aquella- y contra cierto él. en efec to. era Oueredemo. m ientras que el mio .
cang rejo 10 1, sofista ta m bién el. llegado del mar y recién So fr on isc o.
de sembarcado, según c reo ,~ . Y como éste lo atormenta. - ¿ Pero Sofronisco era pad re -dijo-, y... Queredemo
ba a s í. del lazo de la izq uierda IOJ , con sus pa labras. q uie- también ?
TO decir con sus mo rdedu ras, ll amó en a ux ilio a su sobrio -c-Eíecnvame me - respodi- , u no e ra el mio y ot ro el 29811
d no Yol ao. que le p restó conven iente ay u da. Pero mi de él.
Yolao ,o., s i vini era. má s b ien ha rí a lo cont ra rio. -Entonces -preguntó-, ¿Queredemo era dife ren te
- Me di rás. po r favo r, c ua ndo ha yas terminado tu re- de «pad ree "lO?
lato -preguntó Dioni sodoro-, si acaso era Yolao más so- - Por lo me nos de l mío -c-co n testé .
brino de He racl es qu e tuyo . - Ent onces e ra padre s ien do algo d ife re nt e de padre ?
- Lo mejor qu e p uedo hace r, Dionisodoro, es respon- ¿O e re s tú loo rm
mi smo que pie . d r-a JI. ,. '•
derte - dije- , po r qu e efec t iva men te no cesarás de p re- - Temo - afirme- que tú me ha gas aparece r como ta l.
a unque no c reo se rlo .
'011 Alu sió n al p roverbio ~ ni el mi s mo Her ecle s puede cont ra do s.
(d . Ft dó .. 89c 5). , O~ Fe ná re ta (d. TutelO t 49a 2). ,
'0' En e l segu ndo de lo s tra bajo s de He ra cles , «un cangrejo e no rme ' 00 E l so fism a q ue se p re pa ra cons idera «p ad re e no co mo un a l n-
ay udó a la Hidra mordien do e l pie d e Heracles. Por eso lo ma(6 )' llamó huto que pu ed a cor respon de r a u na plura lidad d e indi vid uo s, s in o co mo
e n sU ay u da a Yola o ... q uien quem ó la s rale es d e las c a bezas con los tiz,?" ca recte rts rica d e un 50 10 in d ividuo. E l esq u ema es: Ou er ed emo no es So-
nes impidi en do qu e res u rllieran. (A PO LODO RO, II 5). f ron isco; So fr oni sco es padre; por lo tan to , Oueredemo n o es pad ~e . ,
101 Se refi e re a l reci ent e regreso a Atenas d e los extranjeros {d. '01 «Se r lo mi s mo qu e u na pied ra . o <vivir como u na piedra. sJijm·
271b ·c y 272b). fica ca recer de sens ib ilida d (d. Gorgias 494a8 ). La e xpresión figura ba e n
JO) Dioni sodoro estaba se nta do a la izqu ierda de Sócrates (el. 271b6 un pop u lar so fi sma cuy a p remi s a in ici a l e ra: . El h omb re no es un a pre-
y n. 21), de modo qu e ~l sería e l ca ng re jo y Eutidemo la Hi d ra. .In, . y s u concl us ión: . E I homb re es un perro (o un buey).• Su desa rrol lo
' (loO Podrla tra ta rse de un a al us ión a Clesipo, pero no es segu ro. es tá e n DJ6 GEN ES L AER CIO (IJI 54).
256 DIÁ L OGOS EUTID E M O 257

- ¿ Ent on ces eres a lgo di fe re n te de pi edra? -¿Sólo de los hombres - pregu n tó Ctesipo- o ta mo
- ¡Por supue sto que si ! bién de los ca ballos y de tod os los dem ás se res vivie nte s ?
-¿ Entonces, s iendo a lgo d iferen te de pied r a - d ijo- - De todos - contestó.
no e re s pie dra . y sie ndo a lgo di fe rente de oro, no e res o ro? _ ¿ Y también tu madre es madre de todos ? d
- Asl es. -c-Ta mbt én .
- Por lo ta nto - afiad ió-, tamb ién Oue redemo. s ien. _ ¿ Entonces tu mad re - d ijo- es t a mb ién mad re de
do algo di fe ren te de padre, no se ría padre. los erizos de ma r ?
- Pa rece ría no se rlo - d ije. - iY la tu ya ta mbienl, co ntestó.
b - Porque si Querede mo es pad re - in te rvino Eutl- _¿ Entonces tu eres herman o de los ternerito s, de los
de mo-, entonce s, po r el co ntrario. Sofrontsco. a su vez, perritos y de los cerditos?
siendo diferente de padre, no es pa dre , de manera que tú, -Como tú -dijo.
Sócrates. no ti en es padre 1011. - En co nsec uencia , tu padre es un cerdo y un perro .
Ctes lpo , tomando al vuelo la pa labra. dijo: _ jY el t uyo también !, dijo.
-¿ Y a vues t ro padre, a su vez, no le ha sucedido lo - Admitirás eso en segu ida, Ctesipo - in tervino Dio-
mismo ? ntsodoro-c , si me contestas. Dime. ¿tienes un pe r ro ?
- En lo más minimo - respond ió Eutidemo. -51, y ba stante malo - respo ndió Ctesipo.
- ¿ Es, pues -dijo-. el mismo ? -¿ Tiene cac hor ros?
- El mi smo . por cierto. - SI, Y tan malos como él -dijo. e
e - Lo lamen ta rl a. si as í fuese. Pero . dime. Eutidemo. ¿es -¿Entonces, el pe rro es el padre de ellos ?
él sólo mi padre o también el de los demás hombres ? -Sin duda, yo mismo lo vi acoplarse con la perra.
- Tam b i én de los de má s -respo nd ió--. ¿D crees qu e -Ahora bie n, ¿ no es tuyo e l perro?
la mi sm a persona, s iendo padre. no es padre? - Po r su puesto - d ijo.
-As! lo creta -dijo Cte s ipo. - Entonces, siendo padre y siendo tuyo, el perro es tu
- ¿Có mo - d ijo el otro-e , crees que un a mi sma cosa. padre y tú eres el hermano de ' los cac ho rros 110.
s iendo oro. no es oro, o que u n hom bre , sien do hom bre, y de nuevo Dioní sodorc , si n to ma r alie nto, a fin de qu e
no es hom bre ? Cte sipo no se le ade lanta ra, co ntin uó:
- iCuidado. Eut ide mo !, advirtió Ctesipo. Tal vez, co- - Respó ndeme todavía a esta pequeña p regu nt a : ¿go l-
mo d ice el proverbio, «no estás atando lino co n lino » 111'. peas a tu pe rro ?
Afirma s, sin d uda, algo notab le. si dices que tu pa dre es Ctes ipo, rie ndo, le co ntestó:
pad re de to dos. - ¡Si, por los dioses!, ya que no pu ed o golpearte a t i.
- Pe ro lo es - agregó. - ¿Go lpeas, pues, a t u pa d re?, dijo.

110 La fa laci a es as í: e l per ro es padre; el perro es tuyo ; po r lo ta nt o


lD' El sofi sm a Jo explica AR ISTÓTELES (Re futac iones 5ofistíca5 el perro es tu pa d re. E s u na fa la cia de co mp os ición. ARISTÓTEl F. s la clas i-
166 b28-) 6). fica co mo de accide n te y trae a co lac ión, entre ot ros, este m ismo ejem·
109 Comparar c asos qu e no son sim ila res (cf. ARlSTÓTIiLllS, Hsica plo (Refuraclon es soíistícas 179a 26-b6). La fa la cia se a poya e n e l s ignlfl·
207a I7.18). e lid o de 114 o 114)'0, q ue indica n p ro piedad co mo re lación simg ulnea.

61 - l7
258 DI Á L OGOS EU T ID EM O 259

299a - Muc ho más ju sto se ria qu e golpeara al vuestm _. y a Ge ri ó n y a Briáreo III - pr e gu nt ó- los arma-
- dijo-. po r ha bé rsel e oc u r r ido engendrar hi jos tan su nas d~ ese m odo ? Yo te c re ta m á s list o, s in emba rgo, s ien-
bia s. Pe ro s upongo, Eutide mo. qu e han de se r muchos 101. rlu un profesional de las a r m as, a l igu a l que este tu
bie nes q ue ha brá n obte nido vue s t ro padre y lo s cacho r ros l'lllllpa ñe ro.
de este vues tro sabe r. Eut idemo ca lló. Pe ro Dio nisodo ro, retoma ndo la s res-
- No ne ces ita d e m uchos bien es, Cteaípo. ni é l ni t ú . puesta s ante ri o r es de Cte s ipo, preguntó: d
- ¿Ni ta mpoco tú , Eut idemo ? pr eguntó . _ Y e l oro, ¿no te parece qu e es un b ien te nerlo ?
- N i n ingún otro hombre . Po rqu e, dime Cteslpc, con- - Po r ci erto, y en cant idad - respo ndió Ctesipo.
b sideras q ue es un bien pa r a un e nfe r m o to m ar u n reme. - Ento nces, en t a nto bienes, ¿ no te parece qu e la s ri-
d io cua ndo lo nece si ta, ¿ o a caso no te pa r ece un bie n? O quezas s e deben t ener sie m pr e y en todas p ar t es ?
cu a ndo u no va a la g ue rra, ¿ cons ide ra s que e s u n b ien pn- - ¡Cla ro que s i!-, dijo
r a un homb re ir co n las a rmas o s in e llas? -ri: y admit es, a sim ism o, q ue e l oro es un bie n ?
- A m í me pa re ce q ue sí. Pe ro c reo que sa ld r ás con al. - Ya lo he a dmitido -ccont e st ó.
gu na de tu s oc urre ncias. - ¿ Po r c o ns igu iente, es ne cesario ten e rlo s iem pre y e n
- Lo sa b rás mejo r s i me escuc h as - d ijo . Res pon de: Indas partes y. p rinci palme nte, co ns igo mi sm o? Ademá s,
pu esto que es tás de ac ue r do en q ue es un bien para un ¿no se r ía e l m ás feli z de los hombres quien t uvie ra tre s
ho m bre to m a r un r emed io c ua ndo lo ne ce sita, ¿ no se rá ta le ntos de oro e n e l es tómago, u no e n e l c r áneo y u na es- t
mejor q ue de ta l bi e n tome lo m ás po s ib le? ¿ Y en es e tetera de o ro en cada u no de los ojos ?
caso no co nve nd rá que a lguie n le trit u re y me zcle un a ca. - Po r lo m en os c uent a n, Eu t idemo - dijo Cte s tpo-> ,
rret a d a de el é bo ro tll? (lile entr e los e sci ta s , los m ás felice s y mejores son a q ue -
Y Cte s ipo respon dió: llos que t ienen m ucho oro en sus propi os c ráneos -para
- Po r supue sto , Eu tidemo , siempre q ue qu ien la to me ha blar com o lo hada s tú a ntes cuando decías q ue mi pe -
e tenga e l tamaño de la estatua de Delfos 112. I T O e ra mi pad r e- , y 10 qu e es a ún asomb roso, [es que
- Asi, pu es, también en la gue rra -conti n uó- , pue s- heben e n sus pro p ios c ráneos áureos y co ntem pla n su ca-
lo qu e hallar se pro vis to de a r m as es un b ien , convie ne em - vidad in terior m ien tr a s sostiene n la pr opia ca beza en s us
puña r e l m a yo r núm e ro po sible de lanza s y esc udos, ya ma no s! '" .
q ue so n preci samente un bi en. _¿ y ve n los esci ta s y todos los demás ho mbres - pre· 300a
-Por ci e r to - respondió Ctes ipo--. ¿ No lo crees tú a sí.
Eutide mo, o basta tener una so la la nza y un escudo ?
- Sí.
IU Brt áre o era u no de los gigan tes de den braeos q ue a yudo a zeus
",ml ra lo s Titan es; Ge rión , u n mon st ru o de tre s c ue rpos cu yos b ueyes
rubO He rad es e n el décimo d e s us trabajo s.
11 1 El elé bo ro _ de ra lz p u rgan te y d iu rética- na conslde red c r...· 11" Los esci tas. se gu n re fie re HERooo m (IV 65), u til izaba n los c rá ·
med io efica z co ntra la loc ura. lIeos d e lo s enemigos pa ra hacer co pas . El equí... oco en el te110 se basa
111 P ro ba ble men t.... la estatua d e Apolo q ue er igieron los griego s en ['11 la e1presion . s us. o osus p ropias . o oen sus- que, con r espec te a la
D.Mos de spués d e las bata llas de Artemi sio y Sa lam ina (P ~U S~N l foS . X 14. I",,,,,sio n d e un c rá ne o, p. ej., pued... Indica r tanto a lgo q ue form a parte
3). Seg ún H ~ "ÓO O TO (VIlI 121) te nía una a ltu ra d e 12 codos ( = 5,32 m.¡ del propio cue rpo . co mo algo q ue no.
260 OIAI,OGOS
EU TI D EMO 26 1

gun tó Eu tidemo- las cosas capace s de ver o las incn- Me parecíó que Ctesipo es taba muy a nsios o po r q ue- e
pa ce s ? lIS. dor bien frente a su prefe r ido .
- las capaces - dijo . - Cua ndo ca llas - d ijo Eut ide mo-, ¿no c a llas todo ?
- ¿ Y ta m bi én tú?, preguntó. - Si - res po ndió.
- Tambié n yo . - Ento nces ca llas también las q ue habla n, s i e llas fo ro
-¿ Ves. pu es, nue st ros ma ntos ? umn pa r te de - todo - .
- SI. -¡ Có mo! . excla mó Ctesipo, ¿ no callan todas ?
-c-Ent onces és tos so n capaces de ver? - No creo - dijo Eutidemo.
e-Cla ro, ma r a villosame nt e - d ijo Ctesi po . - Pe ro, q ue r ido, ¿ todas las cosas ha bl a n ?
- ¿ Y qu é ven... ? pre gu ntó. -c-Sí, por lo me nos las q ue h abla n.
- ¡Na da ! Supongo que no creerás qu e ven . ¡Oué ino- - Pe ro yo no p regun to eso -cdíjo->, sino si todo c a lla
cen te que eres! Pa rece. Eut id emo. que te hubie ras dormí- u hab la .
do con los oj os abie r tos , y. si fuera posible hablar sin de. - Ni una cosa ni la otra y ambas a la vez - inte r ru m pió d
cir nada, q ue precisamente es tuvie ras haciendo eso. apres u ra da m ent e Dionisodoro-. Sé bien que a semejan-
b - ¿Y crees - dijo Dio nisodo ro- q ue no sea posible ha- te re s pu es ta no tend rías qu é replicar.
bl a r c a lla ndo lIO? y Ctestpo, soltando una sonora carcajada. co mo a coso
- De ninguna manera - respo nd ió Ctesipo. tumbraba a hacerlo. dijo:
-¿ Ni tam poco callar hablando? -c-Eu t idemo, tu hermano ha log rado que el argumen-
- Me nos aú n . to pueda te ne r ambas r es puestas. ¡Está perdido y a caba-
- ¿ y cua ndo dices «pied ra s», «made ras », «híe r roe- , no do! Y Climas. q ue estaba divirtiéndose m ucho, comenzó
ha bl a s ca lla ndo m ? a reírse, de modo que Ctesipo se sintió como s i Hubiese
- No por cierto -dije-o s i paso ju nto a la s herrerí as. c rec ido die z veces en tamañ o. Creo que Ctesipo, co mo
pues di cen q ue a lJi los hi e rros. s i uno los toca . g r itan y buen pícaro. ha bía a prendido de e llos, escuchá ndo las , es -
calla n y c hillan de lo lin do, de modo q ue. m erced a t u sao las argucias, ya q ue semeja nte saber no lo ha y hoy día en
be r, no te has da do c uenta de q ue no decí as na da. Pe ro, otros hombr es.
e n fin , dem ué s trame a ún el o t ro pu n to. es dectr . cómo re- Yo d ije e nto nces:
su lta posible callar habla nd o. -¿ Po r q ué te r íes. Clinias, de c ues tio nes ta n se ri as y e
hell as ?
lI) Man te ngo , de es ta ma ne ra, la am big üeda d del o rig inal , que lo _ ¿ Y tú , Sócrate s - inte r vin o Dio nisodoro-. has vis -
nusmo pu ..d e s ignil ic ar ( t¡ _q ue (las cusas) p ued en ver _, co mo (2) «que lo a lguna vez a lg una cosa be lla?
son s usce ptt bl..s d e ser vista h, y de ah i q ue la ta lacia co nsis ta e n acep o
ta r q ue a un obje to inan imad o le s uced a (2), y pasa r enl onces a sostene r
- Por sup uesto, Dionisodoro -respo ndí-, iY m uchas!
(1), co sa qu e Cte sípc no ad mite . (Ver ARJSTÓTHES, Reftu aciot1n soíisticas -Diferentes de lo be llo -dij o- o id énticas co n lo 30 !Q
166a 1O.) bello ' ll ?
". La ambigüedad. propia de la forma e xpresiva grieg a, consist e en
qu e «ca lia ndo _ p uede re fer irse la n to a qu ien hab la com o a las cosas de
las qu e se hab la . 111 Alusión al p robl em a de la pa rticipación en la reo rta pla tón ica d e

111 «ha bla s ca lla ndo _ = ha bla s de cosas q ue ca lla n. lns fo rma s. El pa ~aj e deb e relacio na rse, como a pu nta R. K}l~T·S 'M,\(H.J ~.
262 DI ÁLOGO S EU T IDEM O 263

Me vi en to nce s e n apr ietos. sin sa be r q ue re sp on der. -¿ As í que tú sa be s - d ijo- Io q ue conviene a cada aro
y pen sé que m e lo m erecía po r ha ber osado a bri r la boca l(" sa no ? Po r ej em p lo, ¿a q ui é n co nv iene forja r Ill?, ¿ lo
S in embargo. respondí : _Hiles ?
- Son d iferente s de lo be llo e n s í. a unque un a c ien •• - S I, cl a ro. a l he r re ro .
be lleza está presente e n cada un a de ellas. _¿ Y mode la r la a rc ill a?
- ¿ Ento nces - d ijo-, si es tá presente junto ! " a t i UJI - Al al fare ro,
buey, tú eres un buey, y como yo estoy ah ora pres ent e ju n. _ ¿ y degolla r, de so lla r y cor ta r la c a rn e en trozos pe.
to a ti , t ú e re s Dion isodoro? quc ños para hervirla y a sarla?
- ¡Por fav or! , no blasfem es de es a manera . - Al coci nero -i- r es pon d í. d
- ¿ Pero de qu é mane ra - d ijo- . ha de estar un a cosa -ri: Y si u no hace lo q ue co nviene - d ijo-, obr ará bien ?
presen te j un to a a ira para que és ta se a diferen te ? - Muy bi e n.
b - ¿ Te t ra e d ific ult ade s eso -c-d ije-c-, t rata nd o de im i- -¿ Ento nce s, c o mo di j is te, conv ie ne cor ta r y de sollar
ta r por m i pa r te , e l s a be r de e so s dos ho mbre s. que lamo 111 carnice ro? ¿ No ha s a d m iti do e so ?
dese a ba poseer? - Lo he admit ido -c-co n te stó-e, pero perdóname ...
-¿ Cómo no va a traer dific ult ades - respo ndió-, y no - Es evidente, pues -cont in uó-. qu e si u no d egüe lla
só lo a mí s ino a cua lq u iera. algo q ue e no e s e I N ] .11 cocine r o. lo corta e n trozos. lo ha c e hervir y a sar, ha ce
-¿ Qué d ice s. Dionisodo ro ?, ex cl amé. ¿ no e s ac a so lo IHq ue conv iene y si u no forja a l herrer o y m o del a en a r ci-
bello, bell o y lo feo. feo? lla a l a lfa rero, ta m bié n hará lo q ue convie ne.
- Por cie rto, si a s í m e parece - res po nd ió. - ¡En el no mbre de Po se idó n - e xclam é-, le e stá s po - e
- Pe ro , ¿ te pa rece ? nicndo el co lofó n Ul a tu sabe r ! ¿ Pod ré yo a lca nza rlo a l-
- Po r su pues to - d ijo. Runa vez Y lo gra r que llegue a se r mío p ro pio ?
- En tonc es también lo id éntico es lo idéntico y lo di- _ ¿ y s a brás re conoc er, Sócrates, que ha llegado a s e r-
fe r ente lo dife r ent e. Y, na t ura lme nte, lo dife rente no es te propio ?, pre gu nt ó.
e lo id éntico. Yo creía q ue ni un a c ri a t ur a podía tene r d tñ- - Es evide nt e q ue s í - re spond l- , s iem pr e que t ú lo
c u lta des en esto: q ue lo diferente es lo d ife rente. Pe ro t ú , q uie r a s '" .
Dio ni so do ro, debes habe r desc ui dado del iber adamente el - Pe r o t ú - a g regó-, ¿c ree s q ue c o noc es lo q ue te e s
punto, porq ue en todo lo d em á s , as í co mo en lo q ue co n- prop io ?
vie ne a cada a rt esano , pa re ce q ue llev á is a c a bo esplénd i- -Claro, a me nos q ue tu di ga s o t ra cosa, ya q ue , en efec-
dam e nte vues tra labo r de en se ña r a d isc u ti r. to, «co m enza r por ti debem os y por Eu t idem o termi -
na r > I N.

{«Pa nnen ides' sai! a nd Dicnysodorus' o u , Phrol1t'5i.s 12 [I967L 9 1 ·98~ ron 111 La fa lac ia se ba :;;a ta mbién e q u¡ en la a n fibo logla. La e xprealó n
PtlTmé l1id t'5130eS- 13 Ic l l . puede rete r frs e a l su jeto co mo a l o bjeto.
1,. Ha y un j uego entre dos ve rbos gr iego s «e s ta r pre se n te t", (q ue IJ I Para e l o ri gen tle! prove rb io , ve r E S TMAPO N, XIV 1,28.
us a Sóc rat es) y - e sra r p rese nte jU"lu <l ' (qu e u sa Dion isod o ro). m AlusiÓn irón ica a 296d 4 (v. n. 99).
110 Po sib le a lusiÓn a Anns tenes, que s ólo a d m ill a co mo ver d ad e ro s 12< Im itación d e u na fó rm u la co rri e nte usa da para in vocar a la
Jos juici os de identi d a d (. 10 bello es bellos , e tc.j. d ivin ida d .
264 DIÁLOGO S EUTIDEMO 265

-c-Aho r a bi e n. ¿ co nsideras qu e te son propias a q uella , Wl y pat r ios y todas las demás cosas de esta índole que
cosa s de las cuales puedes di s poner y de las c ua les pu ue ucn los atenienses.
30211 da s u sa r como te plazca ? Por eje mplo, un buey, un a cv - ¿Cómo -dijo--, Jos dem ás a te nienses no tienen u n
[a , ¿co nsider a rlas que te son propios si pudieras ta nt o ven hus patrio ?
dedos, como don a rl os y ha sta sac r ifica rl os a l dios que l. - Esa denomi nació n -aclaré- no la usan ni los jonios,
p laz ca? ¿ Y si no fuera asi, dirías que no te so n p ro pioa! 10 quie nes emigraron de es ta ciudad para establecerse en
y yo -sabiendo que de la naturaleza mi sma de las pr nuestras colonias, ni nosotros. Tenemos, e n cambio, a Apo-
guntas iba a resultar a lgu na ocurre ncia, y deseándol a otr 11I pa trio, porque descendemo s de Ion ,~. Ent re nosotro s, d

lo más p ronto po aib le-c-, d ije: l eu s no es lla ma do «pa rrí o-, s ino ep ro tec to r de la casa »
- SI, cie r tame nte, la cosa es asl: sólo ta les cosas so n y -Ira trt o », y también Atenea es lla ma da «Ira t r te » ,
m ias. - Eso ba st a - d ijo Dionisodoro--, puest o que parece
- Aho ra bien, animales. ¿no lla mas tú así-preguntó- que tie nes a Apol o. a Zeus y a Atenea.
a aq ue llos que tienen a lma? - As í es - d ije.
- SI - d ij e. _ ¿ Y és tos -preguntó- se rí an también tus dioses?
b -¿ Y admites que so n tuyo s só lo aque llos animales en - Pr ogen it ores y amos -contest é.
los que te es líci to ha cer todas esas cosas qu e hace un mo- - Pe r o, de todos mo dos, tu yos - agreg6- ; ¿no ha s ad-
me nt o yo decía ? mi ti do acaso qu e lo so n?
- Lo adm ito . -Lo he admitido - contest é- , ¿qué pu ede suce de rme?
y él. de spués de u na pa usa fingid a, como s i es t uviese _ ¿ Yesos di oses - d ijo-- son tambié n an imales IlT? e
meditan do a lgo im po rtante, preguntó: Ya ha s ad m it ido, e n efecto, qu e aque llos qu e tie ne n al ma
-Dime, Sóc rates, ¿ t ienes un Zeus patrio In ? son a n ima les . ¿D eso s di ose s no t ie nen a lma?
Yo, sospechando que el razon amiento iría a t erminar - La tienen - respondí.
adond e efect iva mente Jo fue, intenté huir de un enredo que -¿Entonces son también a nimales ?
no tenia salid a, debatiéndome como si est uvie r a ya a t ra- - Son a nimale s.
pado en una red. - y tú has d icho - agregó-- que ent re los an imales son
- No lo tengo - dije-o Dioni sod oro . tuyos aquellos que te es lícito donarlos, venderlos o sa-
- Eres entonces un mise rable impío, alguien que t amo c r ifica r lo s al dios que te plazca.
e poco es ateniense, ya qu e no t iene d io ses pa t rios ni c u ltos -Lo he d ich o - res po ndí- , y no ten go po sibilidad de
ni ninguna otra cosa bell a y buena. vo lve r me a t rás, Eut idemo.
- ¡Te rm ine mos, üíontsodorot . excl a m é, mode ra tu len- -Vamo s, e nto nces, contéstame en segu ida: puest o qu e 3030
gua je y no trates de enseña rm e con torpeza a ntes de tiem- has ad m itido qu e Zeus y los otros dioses so n tuyos, ¿q uie re
po . Te ngo yo ta m bié n mi s altares y mi s c u ltos dom ésti- decir que te es líci to ve nd erlos, o don a rl os, o di spon e r de
ellos a voluntad, como con los dem á s a n imales?
US - Pa n-io», califica nd o a Zeu s, p uede significar tan to «pad re de la Io n es hijo de Apo lo y de Creúsa (v. EU Rlp1D~ 5, Ión 64-75).
11.
ra za . (as i lo e n tie nde Sóc ra tes), co mo eprotector de los ance stro," (y asl La pal ab ra toon, ya apa re cida poco an tes, significa tan to _a n i.
117
lo e nt iende n lo s aten ien ses a l invo carlo}. ma l. co mo «se r vivien te _o
266 DIÁLOG OS EUTIDEMO 267

Enton ces yo, Critón , quedé s in ha bla, como go lp ea do los , m ient ras que el resto piensa acerca de ell os de ta l ma-
por el a rg umen to , pero Ctes ipo, vinien d o en m i ay u da , ne ra que - no me cabe duda- se avergon zarte más de re-
e xcla mó ; futar a los ot ro s con esos razonam ien to s q ue de ve rse re.
- ¡Brav o!. He racl es. ¡q ué magn ifi co argumento ! fu tado con e llos. Además, vuestros razon amientos t ienen
y Dioni sodoro dijo: ta mb ién ot ra pa rt icul aridad qu e os hace po pula res y s im-
-¿ Cómo? ¿ es Heracles bravo o e l bravo es He racle s ? pá ticos. Cuand o a fi rmáis que no hay cosa a lguna n i be lla,
y Ctes ip o: ni buena, ni b lanca, ni c ua lquiera de este tipo '2';, y q ue lo e
- ¡En el no m bre de Pusidón - exclamó- , qué fo rmi- diferente tampoco es de alguna manera diferente; sim ple-
dable u so de la s palabras! Pero me re tiro; es tos hom bres mente coséi s, en realidad, las bo cas de las gentes, como
son im ba tib les . voso tr os mi sm os decí s; y no sólo lo hacéis con las de los
b En ese mo me nto, mi querido Cr itón, no hu bo n ing uno de más, s ino que pa rece r íais obrar de l mismo modo con
de los p resen tes que no pusiera por las nube s ese mo do las de vosot ros dos, lo que resu lta , por cie rto, bast a nte gra-
de a rgumenta r ya esos dos hom bres, y r ie ndo, apla udien- cioso y quita a nimosi dad a vu es tros razona m ien tos. Pe ro
do y manifest ando su regocijo. poc o faltó para q ue qu e- lo más im po rta nt e. sin em ba rgo. es que vuest ra ha bilidad
da ran ex tenuados. Mient ras que pa ra ca da uno de los ra- es t al y sabé is desplegarla ta n artl st icamente que c ual -
zona miemos precedentes, e ran sólo los e na mo rados de quie r hombre pu ede aprenderla en el m ás mínimo tiem-
Eut idemo quienes los fe stej a ban estrepitosamente; a ho- po. Yo mi sm o pude danne cuenta de ello observando a ere-
r~ , . por poco también las col u m nas mis mas del Liceo par- s ipo y viendo con q ué ra pide z fue ca paz de im ita ros a l ins-
t ~c l~a ba n de las acla macione s a los dos hom b res y exte- ta nte. En fin , este aspecto de vuestra ta rea -el qu e se re- 304a
nonzaba n s u regocijo por e l é xito. Hast a yo mi smo me ñere a la rapidez de la transmisión - es , por cie rto, a lgo
e se ntí a dispuest o a admit ir q ue ja más habí a conocido ho m- magnifico, pe ro no es adecuado, sin em bargo, par a el ca-
bres tan sa bios y, subyu gado com ple tame nte por el sa be r so de una di scusión p úblic a . Es m ás, s i queréis hacerme
de l que .hacían gala, me d ispu se a alabarlos y elogiarlos . ca so, guardao s b ien de hablar fr ent e a un público nurne-
-¡ Dic ho so s de vosot ros - d ije-, po r esa adm irable ro so, no sea que éste a prenda rá p ida mente y ni siquiera
di spo sici 6n , qu e os ha permitido tan rá pidamen te y e n ta n os dé luego las gracias. Lo m ás conveniente, en camb io,
poco tie m po perfeccionar u n a s unto se meja nte 'JI! Vues- es qu e discutái s e ntre vosot ros so los, y. si es men este r que
t ~os razonam ien tos, Euti demo y Díonísodo ro . ti ene n. po r lo hagáis dela nte de a lgún otro, ad m it id ta n sólo a quien
Cierto, m uchos ot ros m ereci mient os. pe ro en tre éstos. el os dé di nero. Y est as mi smas cosa s, si sois sensatos, acon-
m ás esp léndi do, e n efecto, cons is te en que no os im porta sejadlas también a vuestros di scipulos, de modo que ja- b
realmente na da d e la mayor parte de lo s hom b res. ni de más discutan con nadie sino con vosotros o entre ellos mis-
d los más vene rab les . n i de lo s má s rep ut ados. s ino sólo de mas. Pu es, así es , Eutidemo, lo ra ro es lo que va le. y e l
los que son se meja ntes a vosot ro s. Porque estoy segu ro ag ua, a pesa r de se r . 10 mejor», como decía Pin da ro 1)0 .
de qu~ mu y poc as pe rsona s -jus ta me nte las qu e os es lo m ás ba rato. [vamos. pu es - e xcl a mé- , admitid nos
asemcJan- pueden enc ontra r de leite e n estos razona míe n- j unto a vo sotros a mi y a nues tr o Clinias!

119 O sea qu e es imposible a gr ega r un predicado a un suj eto.


ll3 La e rís tica (d. 272a y ss.j. Ilo Oli rnpicas I 1.
26 8 DI ÁLOGOS EU TIDE MO 269

Des pués de ha ber d isc urrido de és ta s y o t ras pocas co- -No , ¡po r Zeus! , re spondí. No fui ca paz de escucha r,
sas, Crrtón, no s fuimos. y tú , considera. pues, la mane ra 11 pesar de que traté de acercarme bast ant e, a causa del
de acom pa ñarme en las leccio ne s de es tos dos ho m bres, gen tío qu e ha bía .
e pues e llos a fi r ma n que so n ca pa ces d e enseña r a quie n - Pues va lla la pe na oí dos - d ijo.
est é dispu esto a da rle s di nero. y que n i la capacidad nu- - ¿ Po r qué ?, pregu nté.
t ural ni la edad excluye a nad ie de adquirir Fácilme nte -Porque hubieras esc uc ha do d iscut ir a hombres que e
su sa ber. Además -y est o t e inte resa particularmente son hoy en día los más sa b ios en este tipo de a rg ume ntos.
oírlo-e, ellos sosti ene n que su ense ñanza en nada impide _¿ Y qué te pa rec ió -i- pr egu nt é yo- Io qu e dijeron?
a te nd er los propios ne gocios. - ¡Y qué ot ra cos a quieres qu e d igan -contestó--, sr-
CRIT. - Natu ra lmen te. Sócrates. tam bié n yo soy una no lo que uno sie mp re podría oí r de bo ca de tales c harl~.
persona a la que ag rada escuchar d iscu siones y que gusto- tun es qu e pon en ta n trivia l em pe ño e n co sas qu e só lo m-
samente a prendería algo, pero temo, no o bs tante, se r un o via lida des so n!
de lo s q ue no se pa recen a Eutide mo, de esos que tú mis- Más o menos a s í. de esta flo ri da lJl manera, se e x-
d mo habl aba s hac e un mome nto, que prefieren m as deja r'
presó.
se ref u ta r con semeja n tes razonamient os que vale rse de - Sin em ba r go, la filosofl a -dije- es asu nto agra-
ellos pa ra refuta r a los demás. Me parec e po r ci e rto ridí- dable.
cu lo que te dé consejos; s in embargo, quiero ref eri rte por - ¿Cómo ? ¿ Agrada ble, mi pobre Critón?, exclamó . Di, 3?5a
lo me no s a lgo que acabo de o ír. Has de sa be r qu e u no de más bi en , que no sirve para nada . Si hubie ras es tado p re-
los que s e alejaba de vosot ros, se me acercó mientras ca. sente, c reo qu e te hubi e ras avergon zado, y no poco, de tu
mi na ba . Era alguien que se co ns ideraba su mamente como amigo. ¡Era tan absu rdo su pro pósito de qu e re r ent re~ars~
pe te nte, de esos muy die st ros en escribi r discursos para u pe rsona s que no dan nin guna im portan cia a lo que d i-
los t r ibuna les !JI. Y me dijo: cen y que se aferran a cualqu ier palabra! Y pe nsar que
-c-Cr itó n , ¿ no escuc has a esos sa b ios? esos do s, como te decla antes, es tá n. e nt re los más influ-
ye nt es de hoy en día. Pe ro lo cierto es , Crítón - agregó-,
que tanto e l asunto mism o, como los hombres q ue se de-
III Se ha pen sa do (Spengel, Reed er, Giffo rd y Mé rid ier) q ue se trata dican a é l son uno s nu los y ridlcu los.
de l s óc ra tes - a quien Pla tón só lo no mb ra en Fedro (278e8· 10 y 279b2) A mí me pa reció, Sócra tes, que es t aba equivocado al b
yen la Carta X II I (360c4), si es auléntica - ; si n e mb a rgo . e s muy po sib le menospreciar así el asunto, y no só lo lo es taba él, sino
qu e es te perso naje anónimo represe nte _a la ma yo rla , qu e no s a be dls. c ua lqu ie r ot ro que a sí lo hi cie ra . Pe ro , en camb io, que rer
tingu ir ent re di a lkt ica y er ts üca - , y qu e co ns ti l u ya ese li pa de Influ yen-
le ho mbre de po Jltic a q ue ocu pa u n lu ga r Inte r me dio en t re e l fil ósofo y
discut ir púb'licamente con tales pe rsonas fr ente a tanta
d polí tic o -c-ccmc Anilo en Me " 6 " - . aunq ce se crea filó so fo (P, FJUE!)· Ren te, eso s i me pareció un reproche correcto .
LAENDI!I, Plato, vol . 11; Th e DillloKUe5. First Pu iad , trad . Inll l., Pri n ce ton ,
1964, pil g. 19<4), o que se ubica , e n cu an to a su s inle reses especu la t ivos,
e n u na posieión eq u id is la n te de la re tórica go rg ia na y del uso d e la lógi. 1)1 Para es ta tra.du ce ió n , he e()nsegu id() las ind lcflCio nc s de P. S~o­
ca ant tst énico-ertst tca a quí exhibida, si n llega r, empero, a re co noc e r ni ~ I'.Y , . Pla lo, EUIJ.)'d t m Ul 3O-4eo, CM5S. Phi/o/. 22 (1?2 2l, .z~ 1.2 . El es lllo
ac ceder a la filosofí a. la l como la en tie nde Sóc ra tes (F. AOOl<NO. Eutide· her via a l que es cuc ha b a el d iálogo p lató nico p a ra íde ntlf íce r even tual·
mo (en Platone. Opere com plete, vul. V, Bari , 1980 J ] , pá g. 62, n. 147). llIen te a l anónimo person aj e .
270 D IÁLOGOS E UTIDEMO 271

Soc. - Son a so m broso s, Critón , lo s ho mbres co mo ti St)C. - En e fec to . Cr it ón , as í es. pl a us ibilida d m á s q ue


lo s. Pero no sa b r ia a ú n q ué respu esta darte . ¿ Qu ién l"1 \'1'1 da d. Pues no es fá ci l convencerlos de q ue los hombres. JOóa
e l que se ace rcó ce ns u r a ndo la filosofía? ¿Uno de aq ue ' 111I 10 todas la s de m ás c osa s q ue está n e nt re dos y paru c t-
110 5 q ue so n di es tros en las compete ncia s j ud ic ia les. nI 1'1111 de a m bas. s i se e nc uent ran entre una m a la y una bue -
gún orado r, o uno de esos q ue pre pa ran y mand a n a aqu Il U , so n mejo res q ue una y peores qu e la o tra; s i e nt r e dos
lIos a los t r ib unal es. un a u tor de discu rsos con los qu e lu. rusus b ue nas. pero co n fi ne s q ue no son los mi s mos. so n
orado res com pile n ? llt"lIres q ue a m bas. r espect o a l fin para el c ua l es útil ca-
e CRIT. - ¡Oh no, o ra do r no, por Zeus ! Ni creo que se ha ,tu u na de la s dos cosas de c uya compos ición r es ulta n; s i
ya presentado ja má s frente a un t ri bunal. Pe ro di cen que ' l' e ncue nt ran e nt re dos cosas m al as. pe ro con fin es qu e

en ti ende muy bie n este as u nto , qu e es hábil y q ue ca mpo tlo so n los mi smos. só lo és tas son m ejo r es qu e e l uno y
ne há biles disc u rs os. r-l o t ro de los dos t érmino s de los c uales pa r t icip a n. De b
Soc. - Ya co mprend o. Es precisamen te de ese t ipo de tundo, pu es , qu e s i la fil osofía es un bien e, igualmente ,
gente de la q ue yo m ismo q uería ha bla r te. Son a qu e llos, 1'1 acción polí tica lo es. y ca da un a ti ende a u n fin d ive rso,
Cr itón, qu e Pr ódíco deno m inaba e in te rmedí os , en t re el l' !IIotus ho m bres, enco nt r á ndose en e l m edio y partici pa n-
filó so fo y el po lítico. Se c reen los hombres m á s sa bios , y Ilu de a m bo s. no est á n d icie ndo na da - pues son infe r¡o-
c r ee n q ue. además de s erlo, tambi én lo parece n a los ojo s rn . a a mbos-; si una e s u n bien y o t ra u n mal. unos so n
d de la mayor parte, de m odo q ue no ti en en otro o bs tác ulo mejores y o t r os . peore s ; si, po r último, un a y otra son m a-
par a goza r d e un ren o m b re to ta l que lo s que se oc upan I" s. entonces . e n este caso. sí. d irí a n al go ve rdade ro ; pero
de la fil osofía. Pien san. p ue s. qu e si log ran d esacred ita r ,It· ut ro modo. a bsolutam en te no. Pero yo no c r eo qu e el los e
a es tos. ha ciéndo les fa ma de q ue mid a va le n. ha b ría n con. .nhni tirta n que a m bas so n un m a l. ni que una es un ma l
qu is ta do in me d iatame nte y s in d is puta . en opin ión de to- v «n-a un b ie n. Lo cierto es q ue. pa r t icipa ndo de a m bas .
dos. la pa lm a de la victoria en lo qu e ha ce a s u re pu ta- M IO e llos inferiores a a mbas. en r e la c ió n co n los fin es res -
ció n como sab ios . Pie nsa n, en ve r dad. q ue son 101> m ás sao pcc rivos que co nfieren su propia importa nci a a la fi loso -
bias. pe ro c ua ndo se ve n jaqueado s, e n sus di scu s ion es pr i- 11;1 y a la pol ít ica, de modo q ue . es tando, en r ea lid a d, e n
vadas, le cargan e l fardo a los seg uido res de Eu tidemo . terce r luga r, bu sca n ha cernos c ree r q ue es tá n e n el pr l-
Se co ns idera n, e n efec to. sa b ios. y es m uy na tu r al q ue así mero. Es ne cesario, no obs tante. q ue los perdonemos por
se a. pu es se ti e ne n po r pe rsona s m ode radamente de dica. ~ u ambic ión }, q ue no nos e noje mos, co ns ide rá ndolo s e n
das a la filosofía . y m ode r a damen te a la po lítica, ca nfo r. cambio po r lo q ue so n. Des pués de todo, te nem os q ue ac o-
e m e a un modo de r az ona r ba s ta nte verosím il : juzgan que gc r co n ma g na ni mid a d a c ua lq uie ra q ue d iga algo no ca-
pa r tici pa n de a m bas e n la medida necesar ia y que goza n rente de d isc ernim iento y que va lerosamente pe r sig a la d
de los Fr u tos del s a be r manteniéndose a l margen de pe li- re alizac i ón d e su propósito.
gros y con flic tos. C RIT , - Ta m bi én yo, Sócrates, como siempre te r epito,
CRIT , - Pero, ¿y qu é p iensas tú , Sócrates? ¿Te parece rengo d ificu ltades acerca de lo q ue de bo hacer con mi s hi -
qu e hay algo en lo q ue dicen? Porque no se puede nega r jus. El mas jo ven es to davía peque ño, pero Critobulo est á
q ue es te argumento de ellos tie ne ciert a pl ausibilidad. ya c reci do y necesita de a lgui en q ue le ayude, Ahora bien ,
yu, cada vez q ue es toy cont igo m e s iento dispue sto a c reer
272 D IÁLOGO S

qu e ha si do un a locura e l ha be r me afa na do en ta nt as ul. "


co sas por a mor a mi s hij os. como lo ha si do el matrl nu
e n¡o, pa ra qu e t uvieran una mad re bien di gna; la rlquev
para qu e di spus ie ran de la mejo r fortuna , y llegar a d
cu idar. des pues. por ot ra pa r te, su educ ación. Pero CUlIl
do me pongo a mi rar a aqu ellos que se jac ta n de sa be r edu
ca r a los hom bres. qu edo pasma do. y. refle xiona ndo . 111
pa rece que cada u no de ellos es sumamente extra vagmr
307a te, s i le he de cir la ve rd ad . De modo que no sé cómo enea
m in a r a l joven haci a la filo so fia .
SOC. - Mi qu erido Cru ón. ¿acaso no sabes que en cual
qu ie r ac ti vidad los ineptos. los que no va le n nad a . so n lo
má s, y que, en cam bio, los serios y d ignos de est ima 50 11
pocos ? Po r ejem plo. ¿ no t e parece que la gimnas ia es un.
be lla cosa, asl como la crematística, la ret órica y l.
es trategia ? MEN6N
CRIT. - Ya lo creo.
soc. - y bien. ¿ no ves cómo pa ra cada un a de es ta.
b ac t ividades la mayoría de lo s qu e las practican hace n rct r
cu a ndo realiza n su cometido?
CRIT. - Si. [por Zeus ! Es muy cierto lo qu e dices.
SOco- ¿Y entonces... ? ¿ Vas po r eso a rehui r tú mí e-
mo tod as la s activ ida des e im pedirselas a t us hijos ?
CRIT. - No se ri a ju s to . Sócrates.
SOco- Pu es, en to nces. Cr tt ón. no hagas lo q ue no e.
necesa ri o hace r y deja qu e vaya n po r s u lado los que se
oc u pa n de Hlo softa. se a n bu e nos o ma lo s. Exa mina . en
e cambio. tú. con c u idado y a tención la cosa mism a: s i te
parece q ue no vale la pena. a pa r ta de ella a tod a persona
y no sólo a tus h ijo s; s i, por el co nt ra r io. te pa re ce tal co-
mo yo mis mo c reo que es. ent onces ve tra s ella ardo rosa-
mente y po n te a ejerc ita rl a, co mo di ce el prove rbio, « t ú
y con tigo tu s h ijo s...

(01 - 18
INTROD UCCIÓN

l . Natu raleza del diálogo


Qu izás en ning ún otro diálogo como en el Men ón lo-
Platón co ncentrar, en un espacio tan reducido, y s in
Il I'Ó
qu ita r so ltura ni vivaci dad al con tenido, un a formu la ción
tun lúci da como ajust ada de algunas de las que se rá n sus
principales tes is.
Po r el tema que trata -el de si la vir tu d es ens eñab le
o no- y po r e l mom ento de su com pos ición, se em pa re n-
ta con el Pro tágo ras, el Gorgias y el Eutidemo. Pero d iJ ie-
re de ellos, en lo qu e a hora nos interes a des tacar, po r e l
rigor casi ascético del tratam ien to y el alcance pro gra má-
tico de su p ro pu esta . En efecto, por un lado, la sob riedad
de la exposición llega a límite s tales, qu e personajes y
cue sti ones ir rumpen súbitamente sin presentación algu-
na -lo que ha es candalizado a unos y llevado a otros a
con siderarl o un escrito t emp ra no (A. E. Tay lo r)-; po r el
otro, el cont enido doctrinari o enci e r ra un a intenci ón no
del todo escond ida, ha sta ent onc es inédita en los diá logos
anteriores de Platón, que le ha hecho pen sar a Wilamowítz-
Moell endorff que el M en ón , en el fondo. no es o tra cosa
qu e el program a mi s mo de la Academ ia pla tónica.
Es just amente Witamowitz qui en ha señalado, con ra-
zón, que es te diál ogo cons ti t uye co mo un pue nte ten-
dido ent re lo s escritos an teriores y las gra ndes obras de
la madurez. Con un a man o -la primera pa r te del Menó n
276 DIALOG OS MENÓN 277

(70a ·80d)-, Pla tó n nos vuel ve a po ne r en presencia de lo Il r los restau radores de la democracia e n Ate nas. Apoyó,
cam inos de la refutación, que ya tan to nos ha bla heeh, rmno se sa be , la acusación co ntra Sócrates e n el 399.
transitar y con los que estábamos fa mi lia r iza do s; con I Platón no está in teresado particularmente e n ellos
ot ra - tod o el re st o (SOd.I 00c}-, nos abre la vía a l ejerc ni e n el a nó nimo escla vo-e, sino s im p lemente los ma-
cio nue vo, po r a hora tí mida mente dia léc tico, de atreve: nda como a r que t ipos: el de l joven y promet edo r a r ts tó-
nos a ec ha r la s ba se s sobre las que pueda serposjble, e I la ta y el del adulto e influyente demóc rata. • Anit o - di ce

peculau vemente . asentar una filo sofí a . Frente a ese nu Kuyré - re p resenta e l conformismo social e n tod o su ho-
va hori zon te. de na t ura leza má s arq uitectón ica. el de 1(1 rror: Menón, al int elec tual ernancipado,» Ambo s coí nc t-
primeros di á logos adq uiere claramen te s u f~nción pro .tt·lI en una concepción más polí ti co-social qu e mo ral de
d éutlca. ind ispensa ble. pe ro a la vez insu-fic ienle. 111 virtud y a m bos revelan la mi sma limitación en recono-
--EJ aspec to cons truc t ivo de la segu nda parte está roa I er la ne cesidad d e fund ar la po lít ica en e l co noc imiento
cado por e l recurso a do s he rra mientas que , si bien no so ti el sa be r. Poco importa qu e u no se a adm irador de un so-

nuevas en él. est án aquí. por primera vez, hábil y nov ed Hsta _ Go r gias_ y el ot ro los rechace apasionadam ente
sa ment e e n tre tejida s y complementadas, c ual expedíere 11 tod os : en e l fondo comparten las concepciones de ellos,

te s in eludibles de todo a scenso..!!!t;~ªfl.sJ¡;Q.para el futuro tul vez sin saberlo, Lo único que , en todo caso, los dife -
Pla tón: el mi to e- pe ro no em pleado a la manera sofíst ica-e reucí a es la ac t it ud : bastante más dúctil la del primero,
y las e hip ótesis s , de c uyo manejo los geó me tras ofr ece n 11 pes a r de cierta impetuosidad; absolu tamente anquilo-
un mode lo. suda e intransitable la de l segundo. En c uanto a su fo ro
maci ón, e l contraste con la rousseau nia na ingenu idad y
disposición del prim iti vo escl avo de Me nón lo dice todo.
2. Pe rsonajes y arquelipos
Inte rviene n e n e l di álogo, ade más de Sóc ra tes, otro.
t re s pe rsona jes: Menón, un se rv idor de Menen, un esc le- 3. EstruCl u ra del d iálogo
va s in duda , y Anuo. Este se a b re . s in preámbulo al gu no, con una a bru pt a
Menón es un joven de Tesa lia, he r moso y ri co, de iluso pregu nt a de Menón: . Me puedes decir, Sóc ra tes: ¿es en-
rre fam ilia, con ci erto interés po r la filosofía y d iscí pulo se ñe ble la ví r tud z. ¿o no es enseñable , sino que só lo se a l-
o admirador de Gorgia s. Su estancia e n Atenas e s c irc uns- venza con 13 prác tic a ?, ¿o ni se alcanza con la práct ica ni
tancia l - se aloja entonces en casa de Anito-, y po r Jeno- puede a p renderse, si no que se da e n los hom bre s natu ra l-
fonte sa be mos que m uy poco tie m po después. en el 40 1 mente o de algú n otro modo? .. Es ta t r ip le inqu is ición
a. C., se ha llab a en Ca los as, en Asia Menor, al frente de Ironta l cont rast a co n la sosegada reca pitu lación de los lo-
mil hoplita s y quinientos pe lt a stas, fo rmando parte de la gre s alcanzados e n la conv er sación con qu e se cierra el
ex pedición de Ciro (1 2, 6), Un año después muri ó, casti. diálogo (98b-lOOc).
gado, a m anos del Gra n Rey (11 6, 29). La primera parte (70a·80d) está constituida por la acla-
Anito es un rico ateniense, dirigente del grupo polí ti- me l ón soc rátic a de los re quisitos que debe re u nir toda
ca democrát ico , Fu e es t ra tego e n el 409 , y, adversario de respuesta al qué es de a lgo, y por los tres intentos -que
los Trei nt a Tiranos, se convir tió, junto a Tras ibulo, en uno 110 resu lt an satisfac torios - de of recer, por pa rt e de Me-
27 8 DIÁLOGO S MEN ÓN 279

h ón, una definición de la vir tud . Si n e mbarg o, el resultu En el te rce r momento (86e-95a) aparece la figu ra de
do de estas refu ta ciones no es por comple to ne ga ti vo: II U Anito que, con Sócra tes, tr at a rá de preci sar qu iéne s pue-
\ cara po s iti va cons is te e n que Menón reconoce s u desean de n se r efec t iva men te los maest ros buscados. La co nc lu-
ciert o y adm ite no sa be r de fin ir la cues tión. Se a bre. UII , st ón es clara: no sólo cualquier ateniense «bello y b ueno»,
e l tr áns ito de la propia conc ienc ia del no-saber a l es fu... 110 es capaz de e nseñar la vir tud -como su gie re Anito- ,
ze do ejercicio de la búsque da del sa ber. l ino ta m poco los mejores ate nienses, sus nota b les esta-
La s egu nda pa rt e (SOd-lOOc) se articu la en varios rno, dis ta s, ha n sido capaces de enseñarla a sus hijos -como
men ta s. Arranca e l pri mero con la respuesta de Sócrat es muestra Sócrates-c. Por ta nto, los hechos lleva n a a fir ma r
a una ob jeción de pri ncipio qu e formula Me nón ac e rca de qu e la vir tud no es e nseñable, o no lo parece se r, y consl-
la pos ibil id ad de l conocimie nto (8Od-e). Esa re spuesta gutente mente la «h ipó tesis» de que es un conocimiento no
consta de tres pa sos: un a dedu cción de la doctri na de l. resulta adecuada.
reminiscencia a parti r de la c reencia mítica e n la preexi El últ imo mo me nto(95a-lOOc), apoyado e n el anterior,
te ncia y transmigración de l alma (8 la-S la); una demostra- trata de establece r de qué manera se ha dado la virt ud en
ción efectiva de esa doct r ina me diante una experienci a del los hombres pol íticos. Y así, junto al conocimiento, hace
corte mayéutico llevada a cabo con la in tervención de un lu gar Plató n a la «opinión verdaderas, que se recibe co-
esclavo (82b-85b), y una recapitu lación, al final, de los roo mo una gracia o don divino. y que. desde el punto de vista
sultados alcanzados (85c-86c). Los dos p rimeros de sarro- práctico, es tan útil como el conocimiento . Pero no se la
llos están admirablemente unidos: por vía m ít ic a se dI!' en se ña ni se la aprende; tampoco se la posee po r na tura-
d uce la remin iscencia a partir de la creencia en la ínmc r- leza: es un don, algo excl usivo e intrasfe rible. AIH -y no
talida d de l a lma, y po r medio de una con statación ern p í- en otro lad o- t ien e su origen la virtud .
rica se infiere, a parti r de la remi niscenci a, la inmortal]. Nos equivoca riamos, sin embargo, si su pus iéramos que
dad o preexist enci a del alma. Lo que era, en un p rincipio, és a es la conclus ión del díál ógo. El pa saj e l ooa -sob re
p res upuest o mltico, con fu nc ión de funda mento como di- el fi nal mi smo de la obra- muestra la intención de Pla-
-ce G. Real e.t setransforma e n concl us ión med iante un a Ión. La de u n Pla tón que exhibe su rost ro y se atreve a a n-
adecuada expe rie nc ia. Amb os desa rrollos se vuelven, pu es: tepone rse a su maes t ro Sócrates, Así se rán, en efec to. las
inseparables. - - cosas «a menos que. e nt re los hombres po llt ico s, haya un o
El segu nd o mome nto (86d·8ge) in te nta es tab lecer si la ca paz de hacer polít icos ta mbién a los demás ».•Y ese ha
virt ud es enseñable, no a pa r tir del pre vio conocimiento de se r precisamente el que se pa sujeta r la s móv iles figu-
de lo que ella es, sino por un procedim ien to de «h tpót e- ra s d e Dédalo - las opiniones verdade ras-c. y a l hacerlo,
sís» q ue permitirá a r r ib a r a concl u siones que se con tras. la s t ran sforme en conoc imiento. Sólo e nton ce s la vir tud
tará n con los hech os. La «h ipótesis», que se a poya e n los po d rá enseñarse. porque ha llegado a se r conocim iento_
resultad os del mom ento a nte r ior (85c-86c), es que ..la viro Y ello, nada menos, es lo que pretende el Pla tón qu e fu n-
tud es un conoc imien to». Si lo es , se ría enseñable; pe ro da la Academia.
los hech os ha cen du da r de ello: sí lo fue r a, h a bria maes-
t ras y discí pu los. Y, ¿qu iénes son esos maestros ?
280 Dl Al OGO S MENÓN 281
Me he a pa rtad o en va ri as ocasione s, sob re la base de esos tra bajos
4. Acci ón dramát ica y ubicación de l diálogo V,Ic a lgu nos ot ro s, del text o fija do po r Bu rnet. A fin d e qu e e l lec to r in-
Ir ,esado p ueda co noce r es as dife re nc ias, figu ra a co nt in uac ión u na ta o
Lo s esca sos pe ro precisos d at o s que ofrec e e l d iA lolICl hla de d iver gencias coo ind icaci ón del ed ito r o estudioso c uya lec tu ra
mi s mo y las refere nci as a pu nta das de J e nofo nte perml , ... sigue.
te n es tab lecer la fecha de la acción d ra mática a fin es J I.IlIeds Lectu rd de Bu rnet Lectu r a seBuidd
e ne ro o pri ncipios de feb re ro del 402 a. C. 71a6 "",. Qc;. THO!\U'SON .

E n c uan to a l m o mento e n que fue esc ri to , ha y c o lnc l 7"'2 U . Bwa.


Y'
denc ía e n soste ne r q ue ti ene que ha ber s ido de s pués del 7JdJ 01. o foc , BtJ'TTlolANM.
11poof3tf36:oa t . BUJe&.
387. es d ec ir, al regre so del prime r viaje a la Ma gn a Gre " b3 1Ip ~tjJáoa l
Tl , GElnu;.
c ta. Contribuyen a e llo e l m anejo de las doc trin as ó rfico 74d7 6"
orpOO'Op,oMry fi, GEDlU.
p itagóricas. el empleo bastan te a m p lio de la geometr-ía y 7"" 'kpooopoko)'Ü
6 ip<»T¿:'''' , 'J)oNPSON:.
la uti lización de «h ipó te s is» , co m o la intenci ón ped e. ""7 6 tpe.>T~r.vo<;
o:úT4) , B vrnuMM.
gógico-doc t r ina r ia d e formar un nuevo tipo de pol rt tcoe. 77" (Qh4i
TOÓ'fOU, R u l'l. DI! ELVIRA.
796' . oü
Acerc a de s u ubicac ió n r ela t iva con lo s o tros d iálogos 78d5 aó• • (ri!To. SomEIDf.R.
del periodo de t ransició n, las posiciones p ueden re su m irse tor tv. i¡ dxoplc, Bw a..
ast : Lutosl a ws ki y Bl uck lo colocan antes q ue e l Go rgias. "'" l OTIv . '" ci'kopla
7967 nJ. [ ... ] TI otiv bi¡ MEN. - T I oOv bf¡; ro . 'f M
Myeo>. ST~ lf)f .
e

Lu tos fa ws k i, Ra ed er y Wilamowitz sos tie nen que e l M ~ · TOÚTO M)'w:


R1a l cWK0i3'11 OÓKOUV , DENM ISTUN.
1IÓ" precede a l Eutidemo. mi en t ras que Von Arnlm, Rit.
81b lO Mav, B UTJlIlNM.
ter. Blu ck y Dod ds afirman la a n teriorida d del Eu tidem o,
De todos modos. es tas d isc re pan cias menudas no a fect an
la c ues tión princ ip al. qu e es la de la proximidad de es tas
81<:1 .6v
Ale"
""'"
KaA(;U'IITa l
T¿)V. B wa..
KaAiovta t , Bl ua .
8265 OI Il.O)' l V"' <; y r. OIKO")'.E vt¡t;. T1loMPSON.
tres o b ra s: Menón, Eu tidemo y Go rgias.
....
83<5

87d5
TuplooJuv
d p' 00'11
4)..)..0 Xwpt1;611lVO\I
Tt Ta pTo v . Rusz PE ELVIR4.
d p ' 00 , ST..u.ur.\UN.
auo. Xwp l1;6p,.Evo-,: . BuJa..
NOTA SOBRE EL TEXTO

He segu ido . e n ge neral. la edic ión de J. BlJulI!r e n Pld/onis Opem. \'01.


....
87d7

....
'!:l'" OÜT6
t1lt llEA.L [ ~ .
1;'l rOÜ"'To . . . TOÓT<»V
TI (n!T OÜ, B UICI:.
b n llÜ..dq:· . BLua..
[1;'1TOÜVTO •• • TOÓT...... ] . N .u.:R
111. Oxfo rd , 190 3 (re imp re s ión, 19 57]. pero ten ie ndo a la vis ta ta n to la a no y Bw at.
te r io r w ició n c rílica de E, S. T IIOM f 5 0 N , Th e Meno o{ Plato, Camb ridge, 92c8 l 'ln 1;'lTOÜ ll r.'11 t 1;r¡r OÜflE'II . Bun .
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282 D IÁLOGOS

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Los t ra bajos recíenre s <.le mayor in te rés so n: M EN Ú N
R. G. HOUIIU , e Plato's Meno ., Ph ,.,m esis 5 (1%01. 18- 102.
R. S. DLUCII: , . Pla to', Men o_, Ph ronesis 6 0 961), 94- 10 1.
L. Ga IM"'. ~fi ..i lion in Pl r:l /Q's Me no, 0 510 , 1962.
K. GA ISU, . Platon s MOIO/l un'" d ie Akadc m ie. , A reni" f. MENÓN , SÓCIl.AT ES , SE RV IDOR DE M E NÓN. Á N IT O
úer Ph ílosophi c 46 (1964 ), 24 1-29 2.
J . KH IN, A Com men/l"Y 0/1 Plato ', MU lO, Nor th Caro lin a , 1965. M E NÓN. - Me pued es decir, Sócrates: ¿e s en señ ab le la 70a
R . BllAmJf., Le rcs/anl. S up plém ent au x ( om me n/aires du MblOn de 1'1" virt u d>, ¿o no es ense ña ble, s ino qu e sólo se alcanza con
Ion, Parls , 1978. In prácríca>. ¿o n i se a lcanza con la práctica ni puede
aprender-se, sino qu e se da en los ho mbres natu ralm ente
De la s tra d ucc ion es a ol ro s idiom u mere cen men ciona rse do s eXl'f o de algún ot ro modo ?
lenl es: la de W. R, M. LUIB, en la Loe b Cla ssica l Libra ry, vo l. 165 (p jQ'U,
SÓCRATES . - ¡Ah ... Menón! Antes e ran Jos tesa lio s fa-
Lach es, P ro/IJ go r¡¡s, M eno, EUfh )'dem u s, Lon d re s, 192 4 -hay reed lcl611
mosos en t re los griegos ta nto por su destreza en la equi-
de 196 2- ) y la it alia na d e G . REALE, Pla /o ne, Men one, n resc ía , 1962,
NUe s lra de uda es grande con dos ob ras; la de Bluck , a ntes menc iona
lación co mo por su riqueza ; pero ahora , po r lo que me pa - b
d a,.e n c ue n te a la f ij ación del tex to griego )' a s u inl erp ret ..ció n; la de rece, lo son también por su sabe r, especialme nte los con-
Ruu de Elvira , ta mb ién menc ion a d a, po r la a yud a en la ve nión ca su ll•. ciudadanos de tu am igo Arist ipo 1, los de Lan sa. Pero es-
na, He co n su lt ad o, igu al men te, la lraducción casle lla na d e U. T . OsIll ~ N l. lo se lo debéis a Gorgias: porque a l lle gar a vuestra ciu-
Zllt (Plafó n, M enó n. Méx i co , 1975). dad conquist ó, por su saber, la admiraci ón de los princi-
pa les de los Alévadas ¡ - ent re los que es tá tu en amora-
do Ar istipo- y la de los demás tesalios . Y. en particular,
os ha inculcado est e háb ito de respo nder. si algu ien os pre-
gu nta algo, co n la co nfianza y magnifi cencia propia s de e
quien s abe , prec ísemente co mo él mismo lo hace, ofrec ién-
dose a que cu a lquier griego qu e quiera Jo int errogue so-

, No s e t rata de Aristipo d e Cire n e, disd pulo de Sócrate s, s ino se-


gu rame nte d e aq uel que mencio na J Il NO f'ONT I! en s u An<lb"s' s (1 1, 10).
1 Un a de las fam ilias go bern an tes de la ci u dad de Larisa, e n Tes a-
lia. Lar'isa er a la principa l de las ciudades tesálicas, y estaba ubkadajun lo
a l rio Peneo, dumin a ndo una vas ta y fértil llanura ,
284 DI ÁLOGO S MENÓ N 285

bre c ualq u ie r cosa , s in q ue ha ya na d ie a quien no 1I Sóc. -S i.


respuesta J. En camb io. equ¡ ' . q uerid o Mene n, ha S Ul MEN. _ ¿ y te perec ía entonces que no lo conoc ías ?
dido lo contrario. Se ha producido como una se quedad J I Sóc. _ No me a cuerdo b ien . Men ón, y no te pued o de-
saber y se corre el riesgo de que ha ya emigrado de estu I ir en este momento qué me parecía entonce s . Es posible

7la lugares hacia los vuestros . Só lo sé, en fin, que si qu ie¡ q ue é l lo conocie ra, y que tú sepa s lo que dec ía. En ese d
hacer una p regunta semejante a algu no de los de aqul, 11(\ IIl ~O, hazme recordar qué es lo q ue decía . Y, si prefieres,
habrá nadi e que no se na y le contes te : ..Fora ste ro, pUl hab la por ti m is mo . Segurament e eres de igual parecer
lo visto me c onsideras un se r dichoso - q ue conoce, C'1l I llle é l.
efec to. q ue la vir tud es e nse ñable o que se da de alguna ME N. - Y o si.
o t ra m a nera- ; en cam b io . yo ta n lejos e stoy de conoce r So c. _ Dejé moslo , pues, a él , ya que , además, está
s i es e nseñable o no, que ni s iqu ie ra conozco q ué es en sI ause nte . Y tu m ism o Menó n, ¡por los di ose s ], ¿qué a fi r-
la vi r tud ." ma s que es la virtud ? Dilo y no te re h ú se s , para que r e-
b Ta m bién yo, Menó n, m e encuentr o e n ese caso: como sulte m i error e l m á s feliz de tos errores, si se mu es tra
pa rt o la pobrez a de m is co nci udada nos en este as unto y que tú y Oorgía s conocéis el t ema , ha b ie nd o yo sosten id o
m e r eprocho el no ten er por co m pleto ningún co nocírn tcn- que no he e nc o ntrado a nadie que lo co no zca .
to sobre la vi r tud. Y, de lo que ignoro.quées, ¿de qué mu- j(1)- ~ MEN. _::: No h uy d ificu ltad en ell o, Sóc rates. En p r ime r e
ne ra podría conoce r preci samente¡cóJIJQ. es l? ¿O te pare. ni ~Iu ga r , si q u ie res l a .~ ud de l ho mbr e , es fá cil de cir q ue
ce qu e pue da haber al g ui en q ue no co no zc a po r co m pleto es ta co ns iste e n se r ca pa z de maneja r los a su nto s del
q u ién es Menó n y se a capaz de conoc e r si e s be llo , ric o Es ta do 1, y m a nejá nd o los, hace r bi en por un lad o a lo s
y ta mbién no ble. o lo c on t ra r io de estas cosas? ¿Te pa re. nmig cs , y m a l, por e l ot ro , a los enem igos ", c u id á ndo se
ce que e s posi ble ? uno m is mo de que no le suceda nada de e s to últ imo . Si
M E N. - A mí no. po r c ierto. Pe ro tu , Sóc ra te s. ¿ no co- q uie res, en c a m b io , la virt ud de la m uje r , no es d ifíc il res-
I; na ces en verdad q ué e s la vir t ud? ¿ Es esto lo que te ndr é- ponder que es necesario que és ta administ re bien la casa,
mos que refe ri r de ti t a m b i én en m i pat r ia? con se rva ndo lo que está en su in te ri or y siendo obediente
Soc. - y no sólo eso, amigo. sino que aún no creo ha. al marido. Y o t ra ha de se r la virtud del niño, se trate de
ber encont r a do ta m poco alguien que la conozca. va ró n o mujer, y otra la del anciano, libre o esclavo. se-
M E N. - ¿Cómo? ¿No encontraste a Go r gia s c uando es. gú n prefieras . Y ha y o tras m uc ha s virt ude s, de m a ner a
tuvo aqul s? q ue no exi ste problema e n deci r q ué es la virt ud. En efec - 7la
ro. segú n ca da una de n ue st ra s ocu paciones y edades, e n
J Cf.. sobre este mo do de pru"cde r de Gorg ias , lo q ue PLATóN po ne rel a c ió n con c ada una de nu e st ra s fu nci o ne s , se pre se nt a
e n boca de Ca lides en Go'IiIJ$ 447c. ..1 noso tr os la vi rt ud, de la m isma m a ne ra q ue c reo, Sócr a-
• la esc e n a es en Aten a s.
1 l a d ist inción se esta ble ce en tre conoce r qué e$ ( ti n/in), es dedr,
tes, se p re sen ta tamb ién e l vicio.
la na tu ra leza o es encia de a lgo. y co noc e r cómo es (oo i,m es /i n), o sea la
cu a lid ad o cua lid ade s (prop iedades o a tribu tos) de a lgo . Es ta lrnpc rtan tt. cf 4 27 a. C . (D IOllORO. X II 53 ), p e ro n o sabe mos con ce rt eza c uá ntas vece s
sima d isti nción platón ica cons t it uye U tlQ de los anteced en te s má s lnme. lo hizo des p ués.
dlatos de la qu e ha rá despuh Ari st Ótele s entre su s tan cia y acciden te. 7 Cf. P rold glJf<U 318e-3 19a.
• Go rg ia s es tu vo por pr im e ra vee en Atenas muy po sibl em ente e n , el'. República 334b.
286 DI ALOGa S M EN ÓN 287

Soc. - Pa r ec e que he te n ido mucha suerte, Mf'lll'l , ti la mujer, y análogamen te en los o tros ca sos, o también
pues buscando una so la virtud he hallado q ue tie nes 11111 t .. parece lo m is mo a propós ito de la sa lud , el tama ño y
un e nja m bre d e vi r t ude s e n ti pa ra o frece r. Y. a pro po 1 1" fuerza? ¿ Te parece que u na es la sa lud del ho mb re , y
lo d e es ta im a ge n d e l enjambre , Men ón, s i al preguntan utru la d e la mujer ? ¿ O no se t ra ta, e n todos los caso s , d e
b yo que es u na abeja. c uá l e s s u natura leza 9, m e dí jer 111 misma form a, s iem p re que sea la sa lud, lanto se e ncue n-
que son mucha s y de todo ti po, q ué m e contestaría s si VI' t ll' cn el ho m bre c omo e n c ua lq uie r o t r a pe r sona ?
co n tin ua ra preguntándote: «¿Afi r ma s a caso que e s por s.. MEN. - Me pa r ec e q ue e s la m isma sa lud , tanto la del e
a bejas por lo que son m uc has , de todo tipo y diferente s ho mbre co mo la de la mujer.
e n t r e sí ? ¿ O bie n, en nada difieren por eso, sino po r a lgu Soc. - ¿Entonce s también e l ta m año y la fuerza ? S i
na o t r a cosa, como la bell e:r.a, e l t a maño o al go por e l es tl una muj er es fu erte, ¿se rá po r la for ma m is ma, es de ci r
lo ?» Dime . ¿qué con testarías s i te p regunta ra a sl ? pul' la fu erza m ism a po r lo que re sulta r á fue rte ? Y por
MEN. - Esto cont esta ría: q ue e n nada difie ren u na d " mism a. en tiendo es to: la fu e rz a , e n c uant o fu erza, no di-
la ot r a, en ta n to q ue abejas. hcrc e n na d a por e l hecho d e e ncon tr a rs e e n un ho m b re
Soc. - y si después de eso te p reg unt a ra: eDime, Me ti en una mujer. ¿O te parece que d ifie re e n a lgo?

06n, aquello p r eci samente en lo que en nada d if ieren, por MEN. - Me parece q ue no.
lo q ue so n to d a s iguale s, ¿q ué a fir mas q u e es? ¿ Me po- Soc. - ¿ y la virtud, con res pecto al se r virtud, diferí- 73a
drías d eci r a lgo ? 1'0 e n a lgo por e nco n t ra r se en un niño, en u n a nciano, e n
MEN. - Podrla . uuu mujer o e n u n hombre ?
e S éc . - Pu e s lo m is mo sucede co n la s virtud e s. Aunqu e ME N. - A m í me pa rece , en cie r to mo do, Sócrate s , que
sea n mucha s y d e to do tipo, toda s ti en en una única y mi s. 1", 10 ya no e s se m eja n te a los caso s a n te r io r es .
ma forma 10 , por o b ra d e la c ua l so n virtudes y es hacia Soc . - ¿Por qué ? ¿No dec ías que la vi rt ud d e l homb re
ella hacia dond e ha de dirigi r con atención su mirada cons ist e en admin istr ar bien el Est ado, y la de la muje r,
quien r e sponda a la pregun ta y mue stre, efectivamente, 111 ca sa ?
d en qué co n si ste la vi r tu d. ¿ O no com p r en de s lo que di go ? M EN . - SI.
MEN. - Me parece q ue com p re nd o; pero, s in embar- Soc . - ¿ y es po si b le adm inistra r bi en el Estado, la ca-
go , toda vía no m e he d ado c ue n ta, co m o quisiera , de lo su o lo que fu ere, no haciéndol o se nsa ta y just a me nte ?
que me pregun ta s. MEN . - En a bso lu to. b
S oc . - ¿Te parece que e s así, Men ón, só lo a pro pós ito Soc. - y si a d minis t ran j u sta y se nsa ta men te, ¿admi·
d e la virt ud, que u na e s la de l hom b r e, otra la q ue se d a nis tra n por medio de la j usticia y de la sensatez ?
MEN. - Nece sariame n te.
• La p a labu . r ie•• es O USÚl ye"prna aqu l e l m ismo concepto q ue
Soc. - Am bo s, e n consec uencia, tanto la m ujer co mo
el que respo nde a l qut I' S (cf. n . 5). No s u po ne todavia e l r érm tn c , en e s-
10$ d iá log os de tran s ició n, el sign if icado má s fu erte d e esencia Ir asce n·
el va ró n, nec es it ará n de la s misma s cosas, d e la jus tici a
den le, s in o sólo remire a " q ue tlo com ú n . id enlico o p erma n enl e qu e pe- y de la se n sa tez, si p r e te nd en se r b ue no s .
eee n , e n es te ca S(), teda s las abeja s, no obs lan te d ife r i r en tama ño, belle - ME N. - Así pa re ce .
za , ele. ef. Pro/dgo ras 349b.
Soc. - ¿ Y el ni ño y el a nci a no ? ¿ Pod rlan, ac aso, lle-
l O La pa lab r a g r iega es efdO$ y va le d e e lla lo q ue Se a caba d e d ecir
so bre uus{" (d. n . 9). gar a ser buenos, sie ndo insensato s e injustos?
288 DI ÁLOGOS MENÓN 289

ME N. - En a bsol u to . S I'l<:. _ ¿ y cu á le s son é sa s ? Dila s. Así como yo podrte


SOCo- ¿ y s ie ndo se ns a tos y justos? d.,. Ir te, s i me lo pi d iera s , tambi én o t ra s figuras. d ime tú
MEN. - Si. l>\Illhién o t ras virt udes.
e S oc. - l uego todos lo s ho m bre s so n buenos delmt MI'N. _ Pue s a m í me parec e que la va len t ía e s un a viro
mo modo, puesto qu e llegan a se rl o poseyendo las mt sm 111 11, y la se nsa tez, e l saber, la magn ificencia y mu cht sl-
c os as. 11!l1t¡ o t ras.

MEN. - Parece. S l'lc. _ Otra vez. Menón, no s ha s ucedido lo m is mo: de


Soc. - Y. desde luego. no se rían buen os del m ismo ni IlIh'\'O hemos enco nt r ado m uchas vi r tudes b usc a ndo u na

do s i. e n efec to. no fue ra u na mi s ma la virtud. , ,,la. aunq ue lo he mo s hecho ah ora de o t ra m ane ra. Pe ro
M EN. "" Desde luego que no. Illtlw..-l la úni ca. que está e n toda s e llas. no log r a m os
SOCo- Ent o nc es, pue sto que la virtud es la mi sm a e l! • nco n rra r la .
lodos, t r at a de d ecir y de reco rdar q ué a firmaba Gorglol MEN . _ Es que, e n cierto mo do, a ún no lo gr o conce- b
que es, y t ú con él. hll . Sóc ra te s, tal como t ú lo pretendes. una única vir t ud

MEN. - Pu es. ¿qué otra cos a que el ser capaz de go- " 11 lodos los c a so s. a sí co mo lo logr o en los o tros ejemplos.
d hernar a los hombr es ? ya que buscas algo único en todo. Soc . _ y es natura l. Pe ro yo pond ré todo el empeño
lo s ca sos . 11\·1 que soy ca paz par a que progres emos . Te da s cuenta,
Soc. - Eso es lo que e stoy busca ndo. pr ecisa mente. Pe- I HU ' cier to, q ue lo que sirve para un caso. s ir ve pa r a to-

ro, ¿ es a caso la m is ma vir tu d, Menó n, la del n iño y la del ,Ius. Si a lguien te pregunta se lo q ue. ha ce u n momento.
esclavo, es de cir. ser capaz de go be rna r a l a mo ? ¿ Y te pa- dccla: «¿ Qué es la figura. Men ón ? , y s i tú le co nte sta r as
rece que si gue s ie ndo e sclavo e l q ue go bie rna ? t lll C es la redonde z, y s i é l te -volviera a p regun tar, como

MEN. - Me par ec e que no, en modo a lguno. Sócra te s. VII: . ¿ Es la redondez la figura o bien u na figu ra ? , di rías,
SOc o- En e fec to. no es p robable , mi di stinguido a mi- , in duda . que es una fig u ra.
go; porque cons idera toda vía es to: tú afirma s «se r capaz ME N. - Po r s u puesto.
de gobernar •. ¿ No a ñadire mos a eso un «j us ta m e nte y no SOCo- ¿ y no se rá porque ha y a de má s o t ras fig u ra s ? e
de o t ra m ane ra »? M EN•.- SI.
M EN. - Cr eo que si. po rq ue la just icia. Sócrate s. es una SOCo_ Y s i é l te continua r a pre gunta ndo c uáles, ¿se
virtud . la s d iría s ?
e SOc. - ¿Es la virtud. Men ón. o una virtud ? M EN. - Cla ro .
M EN . -¿ Qué d ice s ? Soc. - y si de nuevo . ahora acerc a de l color, te p re -
S oc . - Co m o de c ua lq uie r ot ra cosa. De la redonde z. gun ta r a d el m ismo modo, qué es, y a l r e spo nd erl e tú q ue
su pongam os, por ejem p lo, yo di ría que e s una cierta figu- cs blanco, e l q ue te pregu nta a grega se, después de e so :
r a y no sim ple me nte que es la figura. Y d ir¡ a a sí , porque . ¿ Es e l bl a nco u n co lo r o el co lo r? », ¿le co ntest arías tú
hay también otra s figu r a s . que es un co lo r , puesto que ha y además ot ros ?
M EN . - Y di ces bien tú, porque yo también di go que M I' N. - Cla r o.
no s6 10 ex is te la jus tici a sino también otras virt udes. soc. _ y si te pidiera q ue nombrase s otros co lores, ¿ le
d irí as o tr os c olo r es q ue lo son ta nto co m o el blan co lo e s ? d
' tol. _ 19
290 I>IÁLOGOS MENÓ N 29 1
M EN. - Sí. Soco - ¿ Y m e con testarás t ú, a t u vez, sobre la virt ud?
SOCo- y s i, como yo , co n tin u ara el r azon amien to y I M EN . - Yo sí
je se: eLleg amos s iem pre a u na m u lt iplici dad , y no C~ Soc. - Entonces po ngamo s todo el empeño. Va le la
t ipo de respuesta qu e quiero, s ino qu e, puesto q ue a 11I"1Ia.
multiplicidad la de signas con u n ú nico nomb re -y ah MEN. - [Y much o!
mas qu e n inguna de ellas d eja de ser figura , aunque !O t' , Soc. - Pu es b ien , tra temos de de c irte qué es la figu-
también contrarias e nt re 51-, ¿qué es eso que incluye ,.. I II Fíjate si a ceptas esto: que la fig ura sea para noso tros

e men os lo redo ndo qu e lo rec to, y que llamas fig uras, al ll Illlucl la ún ica cosa que aco m paña sie m p re a l colo r. ¿Te
man do q ue no es meno s fig ura lo ' redondo' 11 qu e lo ' rfO 1''' su fici e nte, o lo p refie res de o t ra man era ? Po r mi pa r- e
lo' h ¿ O no dices así ? 11' , me daría po r sa tisfecho s i me h a blaras a sí acerca de
ME N. - En efecto . lu virtud.
SOL - Entonc es, cuando d ices as í, ¿a fir mas acaso qu MEN . - Pero eso es algo s im p le, Sócrate s.
lo 'redondo' no es más redond o que lo rec to y lo 'rec to' Soc. -¿ Cómo d ices ?
no es más rec to qu e lo redon do ? M E N. - Si entie nd o, figura es, en tu ex plicación, aque-
MEN. - Por supue st o que no , Só crates . llo que acompaña s iem p re al co lo r 'l. Bien. Pero si al -
S6c. - Pero afirmas que lo 'redondo' no es menos 11 guí en afi r mase qu e no conoce el color y tuvie ra así difi-
gu r a qu e lo ' r ec to'. cultades como con res pect o de la figura , ¿q ué crees que
MEN. - Es verdad. le habrías contestado?
Soc. - ¿Qué es e n to nces eso q ue tiene est e nombre d SOC. - la verdad, pien so yo. Y s i el que pregu nta fue-
75a figura ? Trata de decirlo . S i a l qu e te p reg unta de esa 11m "e un o de los sa bios, de esos erí sticos o de esos qu e bus-
nera sobre la figu ra o el color co ntes tas: «Pe ro no com ca n las cont ro versia s, le contestarla: e Ésa es mi respues- d
pre ndo, hombre, lo qu e quieres, ni e ntie ndo lo que di cce- , l a, y s i no d igo bien, es t area tuya e xa minar el argumento
es te quizás se asombra ría y dí ria: _¿ No com pre ndes que y refuta rme.• Y s i, e n ca mbio, como ahora tú y yo , fuesen
es to y buscando lo qu e es lo mi smo en todas esas cosas ? a migos los que quieren di sc utir entre si, se r ia necesario
O tam poco, a propósito de esas cosas, podrías contesta r, en tonces conte sta r de manera más calma y conducente a
Men ón , si alguien te pregu nt ase: .¿ Qué hay en lo ' redon. la discusión 13, Pe r o ta l vez , lo más conducente a la d is-
do ', lo ' rec to' , y en las ot ras cosas que llamas figuras , qut' cus ión consist a no só lo en contestar la verdad, sino tam-
es lo mism o en toda s ? Trat a d e decirlo, para que te sir. bié n con pal ab ras qu e quien pregunta admita conocer. Yo e
va, además, com() ejerc icio para responder so bre la vir tud. trataré de p roc eder ast. Dime, pues: ¿lla ma s a a lgo . fin,. ?
b MEN. - No; dilo tú, Sóc rates.
Soc. -¿ Quieres q ue te haga el fa vor? 11 MenOn e mplea aqul chró<l para co lor; Sóc:ra le\-hab1a...usaoo.$iem-
pr e hasta a ho ra eh.oma. No par eceh-aber ca mbio de s ig nific ado.
MEN . - Po r ci erto.
Il Mlis d ial~ciic a mente d ice el texto, pero no tien e a qul todavía el
significa do tec nícc que adqu ir irá pos terio rmente e n Pla tón . En ca mb io,
11 Pla tón u tiliza aq uí st ró" gyl </P'l (redundu) co mo eq uivale n te de re. P. NATORl' (Pltdos /du nle h re, Leipzi g, 1903, pá ll. 38) Y H. GAuss (Ha nd·
dcndez (stro ng ylóles). Cf. 7J e y 74 b. He co locado co m illas si mples en és . ko m menta, tl. den Dialo¡.:en Platos, \lo l. lI , 1, Be rn a, 1956, pág. 115) pien ·
te come e n el caso de recto a la pala bra cua ndo tiene el s ign ifica do sa n qu e és te se r ta e l p rimer lugar en que el té rmino está usado
ubs truct o. récnícamenre.
292 DIÁLOGOS MENÓN 293
Me refi e ro a a lgo como límite o ex tremo -y con todne MI',N. _ Lo qu ie r o, ¿po r qué no ?
la s pal abras in dico lo m ismo-,- . Ta l vez Pr ódicc l' d i" SI1¡;, -¿ No admitl s vosot ros, de ac ue r do ' con Empé-
tir-ia de na sal ros, pero tú , por lo me nos, hablas de 111 d'll lcs ", que ha y ci ertas emanaci on es de la s cos as?
como limitado y term ina do. Es to es lo que qu iero deci M I; N. - Ciertamente .
nada com plicado. xoc. - ¿ Y qu e hay po-~ acia los c ua les y a t rav és d e
MEN. - As í hab lo. y c reo e ntender lo que dices. 111\ c uales pasan las emanaciones?
700 Soc. - ¿ Y,e nto nces ? ¿ Lla mas a algo «pla no» y a 01 M EN. - Exacto.
cosa , a s u vez, esó lidoe , como se hace, por ejemplo. en In xoc. - ¿ y que, de la s emanaciones, a lgunas se ad ap-
prob le ma s geométricos? II U I a cie rtos poros, m ie ntras que otras son me nores o d
M EN. - Asl hago. ruuyorcs ?
Soc. - Entonces ya puedes com prend e r. a partir J M EN. - Eso es.
eso, lo que yo e ntiendo por figura. De tod a figura diKu Soc. - ¿ y no es así que ha y también al go que llamas
ero efecto. es to : que e lla es aque llo que limit a 10 sólido, n, vl.t a?
más brevemente . diría que la figu ra es el límite de un M EN. - Sí.
sólido.". Soc. - A pa rtir de e st o, en tonces, «com prende lo que
MEN. -¿ Y del color, Sóc rat es, qu é di ces ? tI ' d ígo-, como decía P índaro 11; el col or es una e ma na -
SOC. - ¡Eres un desconsiderado. Menón ! Sometes a un t Ión de las fig u r as, proporc ionado a la vis ta y. por tanto,
a nciano a que te con teste es tas cuest iones y tú no qu iere. percept ible.
b recorda r y decir qu é afir mó Gor gtas que es la virtud. M EN. - Excelente me ha parecido, Sócrates , esta res-
M E.N. - Pero no bien me ha yas con testado eso, S ócra - puest a que has dado.
les, le lo di ré. Soc. - Seguramente porque la he formu lad o de un a
Soc. - Aun con los ojos vendados. Menón, cualquiera ma nera a la c ual estás ha bituado; además, creo. te has de -
sa b r ía, al d ia logar cont igo , qu e e res bell o y que también do c uen ta q ue a partir de ella, podría s ta mbién dec ir qué
t ie nes tu s enamora dos. ('S el sonido, el olor y otras cosa s im ila res . e
M EN. - ¿ Po r qué ? M EN. - As! es.
Soc. - Po rq ue c ua ndo ha b la s no haces o tra cosa que Soc. _ Es u na respue s ta . e n efecto, de alto vue lo " , y
ma nda r, como los n iño s co nse nt idos, q ue proc ede n cual po r eso te agrada má s que la relativa a la figura .
t ira nos m ient ras le s du ra su encanto; y a l mi smo tie m po, M EN. -A mí s í.
ha brás not ado seguramen te en mí que no re sis to a los gua-
e pos. Te d a ré, pu es, ese gus to y te contest a ré. ,. PLUT¡t,I. CO (Q .. .. es t. Ilal. 19, 9 160 ) tran sm ite las sigu ientes pa lab ras
M EN. - H a z.lo , por favor. de Empé doc les: «Has de sa be r q ue hay emanaciones d e tod as las cosa s
Soc. - ¿Qui ere s que te cont est e a la manera de Gor- tILl e se genera n. (fr. 89 Oll'Ls-K RANZ = 419 Y 558 B. C. G.j. Est e pasaje
,kl Mellólles recogid o, ade más, como test imon io para Empedocle s por
gias, de modo qu e puedas segu ir me mejor? I lII'LS.KIl.....NZ (v éase 31A92 = 4 20 B. C. G.).
11 Fr . 121 (TURYN) = 94 íBowll.....) = 105 (SNI!Ll.).
l' Vta sc en es te volumen, n. 36 a l diAlogo E utidemo. li Trllg ild dice e l te xto. Acerca de la ma ne ra de trad ucir el t érm t-
l~ E ~la def inici ón es , probablemente, de or igen pitagóri co (c f. ARI S·
'''', v éase R . S. Bl.u CK, - On tragik é, Plato, M e"'u 76e-, M m..mu$Yllt 14 {1961},
TÓTE I.ES, Mel afisicu l090b 5). 2 ~ \I· 2 95 .
294 D IÁ LOGO S MENÓN 295

Soc. - Pe ro és ta no me co nvenc e, hijo de Ale xidem u, Soc. _ ¿Afi nna s, por tanto. q ue qu ie n desea cosasb~
s ino que aquélla 19 es mejor . Y creo que t a m poco a ti 1 lIas desea_~~!aLbue n ;S?..-:> - ~
lo pare ce r ía, si no tuvieras ne cesidad de partir, como l1l M.EN. - Ciertamente.
de cías a yer, a ntes de los mis te r ios. y pud iera s q uedan Soc. _ ¿ Como s i hubiera entonces a lgunos que de sean
y se r inic iado 1111, rosas m a las y o tros. en cambio, que desean cosas b uenas?
na MEN. - Pue s m e q ueda rt e, Sócrate s , si me d ijeras mu ¡ No to dos, e n tu opinión, m i di stin guido a m igo , desean e
c ha s cosas de esta ín dole. I usas bu enas ?

Soc . - No es empeño. de sd e luego. lo q ue me va a Fal- MEN . - Me pa rec e q ue no .


la r, ta nt o po r t i como por mi , pa ra ha blar de es ta s co sas. Soc . - ¿A lgunos desean las m a las?
Te mo, si n em ba r go. no se r ca paz de decirte m uc ha s co- MEN. - Si.
mo és ta. Pe ro, en fin . t rata t a m b ién tu de c um pli r la pro- Soc. _ Y creyendo qu e las ma las so n bu en as - dices-,
m esa dicién do me. e n genera l 11, q ué es la vir tud, y deja lo co noc ie ndo ta m bién que son m a las, s in embargo las
de ha cer un a m ultiplicida d de lo qu e es u no , como aflr- desean ?
man los qu e h acen brom as de qu ienes sie m pre rompen al. MEN. - Amb as cosas , m e parece.
go, s ino que, manten iéndola en te r a e int a ct a, di m e que es Soc. - ¿ De modo que t e pa r ece, Men ón, qu e si uno co-
b la virtud . Los ejemplos de cómo debes procede r, t ómalos noce q ue las cosas malas son malas, sin e m bargo las
de los q ue ya te he dado, de sea?
MEN) - Pues me pa re ce, e ntonces, Sócrates, qu e la viro MEN , - Cie r ta me nte.
tu d co_ñ s}s~~!_como dice e l poet a, e n ..g usta r de lo beÚ~ soc. - ¿Qué en tie ndes po r «d ese a r» ? ¿ Que re r h acer d
te ne r po de r . n. Y así lla mo yo vir t ud a esto: deseirlas suyo ?
cosas bellas...L~e f- ca paz .de. p r oc ura rselas., MEN. - Desd e lu e go. ¿ q ué otra cosa?
lO Cf. 76a6 . SÓe. -¿ Co ns ide r ando que la s cosa s ma las so n ú tiles
N Se l ra la , a p rime ra w i~ ta. lIe Una a lusión a Jo s fa mo sos rucs de a quien la s ha ce suyas o s a bie nd o que los m al es da ña n a
ini c iac ión e n Io~ mi st erio s eleus ino " que se cel ebr aban e n A le na ~ e n lo qu ien se le prese ntan ?
q ue ser ia para no so tro s el me~ d e le bre ro (wt a se P. 8 0YANO:f., .Sur le s MEN. _ Ha y quiene s consideran qu e la s cosas malas
m )'stt re s d 'Éleusih, Re".. e des E,.. du GrCCIf"U 75 119611 es pecjal me n-
te pál ~ . 46(474). Pe ro )a, e n tre o tros. K. H1LDEBUND (Plato n "" Plaum e
so n útiles y ha y t ambién quienes sa ben que e llas daña n,
(trad. ita l. COUJL Tu rin, 1947, pá g, 1951. E. GIII" AL(.. A propOs d'un pu ....· soc, _ ¿ y te pa rece también q ue s a be n que la s cosas
ge d u Mi no n: u ne ddi n itio n ' tra l iq ue' de la cc uteu r-, Re .,..e des E,,,des mal as so n malas q u ienes consideran q ue e llas so n útile s?
Grecq"es 55 [1942L 12) Y K. GA 'SU: (o P lalo n~ Mello n u nd d ie Akad em ie . , MEN. - Me pa r ece q ue no. de ningún modo.
An:hi" /. Geschichte de' Philosuphie 46 [ 1964], 255-6) o b,;erva ru n q ue K Soc. - En to nce s es evidente que no desean la s cosas
t rata , segu ra men le, de un a a l u ~ ión m ii ~ p recisa a la oco ns ag ra ció n. a la
lilosol ia y a las enseña nza s de la Aca dem ia. Y para el papel d e la «Inicia- ma la s quien es no las reco noce n co mo ta les, s ino q ue de- e
ción- en el filoso la r. vea nse en PlAl óN. Cu r..:ia s 497c , Banque /i! 20ge, Tu · sean las q ue c reían qu e son bu enas, s ie ndo en rea lidad me -
teto 155e y Eutide mo 217d ·c. las . De manera que q uie nes no las co nocen como mala s
11 Es la ún ica ve r qu e ap arece e n PLATÓN la e xpres ión ka/a hó/uu
(cun ge nitivo) que, e sc rita en u na so la pa labra (kathólou) serA elté rmino
t écnico q ue emp lea rá Ar ist ót ele s p a ra des igna r a l un ive rs a l lógico, pon e q ue es te verso desco nocido pued e pe rten ece r 11 un poe m a de Simó.
11 E. S. TIlOMPso N(The Me l1 0 uf PiulO, Cambridge, 1901, pág. lOO) su- njdes de Ceos, q ue vivió en Tesalia, y del que se ocu pa Plalón en Protágoras,
296 DiALOGOS MF.NÓN 297

y c reen que son bue na s. evide n te mente las de sean comu MEN . - Es ex ac ta me n te así, Sócrate s, me pa rece, tal
bu e nas, ¿o no? como lo acabas de preci sar.
MEN. - Puede q ue és os s i. Soc. - Vea mos e ntonces también es to, y s i estás e n lo
Soc. - ¿ y en to nces? Los q ue desea n la s cosas mal ee. ¡ Icrto al afi rma rlo: ¿dices qu e la virt ud cons iste en ser C3-
como t ú a firmas, considerando, sin em ba rgo. que e llas dn- pnccs de p roc u rarse las cos as bue nas ?
ña n a qu ie n la s hace s uya s, ¿sa ben s in duda que se van MEN . - Asi es.
a ve r da ñados po r ella s? Soc . - ¿ y no lla mas cosas buena s, po r eje m p lo. a la
M EN. - Necesariamente. sulud y a la r ique za ?
Soc. - ¿ y no creen ésos que los que reci ben el da ñe MEN . - Y tambié n di go el po seer oro y plata, asl co-
7& merecen lást ima e n la med ida en que so n da ñados ? 1110 hon ores y ca r go s públicos.
M EN. - Necesariamente. ta m b ié n. Soc. -¿ No lla mas buenas a ot ras cosas, s ino sólo a
Soc. - ¿ y los q ue merecen lás tima. no so n desven. h as?
t urados ? MEN. - No , sin o só lo a tod as a quellas d e es te t ipo.
MEN . - Asilo c reo. Soc. - Bie n. Procurars e oro, entonces, y plata, como d
Scc. - Ahora bien. ¿ ha y alguien que quiera merecer d ice Menón, el hués pe d hereditario del Gran Re y " , es
lá stima o se r desventurado ? vir t ud. ¿No agregas a esa adq uisición, Men ón , las pala-
MEN. - No me parece. Sócrates. b ras • jus ta y santamente ». o no hay para ti diferencia al -
Soc . - Luego nadie quiere ", Menón , las cosas malas, telina, pues si alg uien se procura esa s cosas injusta men-
a no se r que quiera ser tal. Pues. ¿qué otra cosa es ser me- te, tú llamas a eso t ambién 'Virtud ?
recedor de lást im a s ino desea r y poseer cosas ma la s ? MEN. - De ninguna ma ne ra, Sócrates.
b MEN. - Puede que d igas verdad, Sócrates, y qu e nadie Soco- ¿ Vicio , e ntonces?
de see las cosas ma las. MEN. - Cla ro que si.
Soc. - ¿ No a firma ba s hace un mome nto qu e la vir tud SOCo- Es nec esa r io. pues, segú n pa rece, que a esa ad -
consis te en que re r cosas bue na s y po der posee rl a s ? qu ts tcíó n se a ña da j us t ic ia , se ns a t ez, san tida d, o algu na
MEN. - Si, eso afi r maba. otra pa rt e de virtud; si no, no será virtud , a unque p rcpc r- e
Soc. - Y, d icho eso, ¿ no pertenece a todo s el que re r, clone cosas bue na s.
de modo q ue e n este as pecto nadi e es mejor q ue ot ros ? MEN. -¿ Cómo podría llega r a se r 'V irt ud sin e llas ?
MEN. - Es ev ide nte. Soc. - E l no bu sca r oro y plata, c uando no sea ju st o.
Soc . - Pe ro es o bvio que, si uno es mej or qu e o tro, lo n i para s í n i pa ra los demás, ¿ no es acaso ésta una vir t ud,
se ria con respe ct o al poder. la no-adqu is ici ón n ?
MEN. - Bien cie r to .
Soc . - Es to es, e ntonces, seg ún pa rece, la virt ud, de l. Con ocasión de la in va sión de Jerje s a Greda . lo s A I ~vad liS (el . n .
e ac ue r do co n tu s pala b ras: un a capacid ad de pr oc u ra rse 2). junt o a otros te sa lios. ad opta ron u na actit u d p ro-pe rsa (HEKÓPO TO , VII
la s cosas buenas. 172. 174) y, se gu ra men te , a lgú n ant ecesor-d e Menó n est rec hó 1Iinc u los co n
1" corte d el Gran Rey d e los persas.
H . Querer . y . d esea r . son u tiliz ad os por Platón, aq u í. como s inó- l' La p alabra griega e s aporla (.. no-logro », «ca renc ia . y t amb i~n «po-
n imos. h l'Cla o) qu e jue ga aq uí co n e l ve r bo porlU $lha i (procura rs e).
298 DIÁLOGOS MENÓN 299

M EN. - Par ece. sabe q ué es un a pa rte de la vir t ud, s in sabe r lo q ue es e lla


Soc . - Por lo tan l o , la adq u isición de c osas bue nas IIU misma ?
se ria má s virt ud que s u no-adqui sició n, sino que, como pa MEN. - Me parec e qu e no.
rece, se r á vir tu d s i va acompañada de jus t icia. pe ro vicio, SÓ<:. _ S i r ecuer da s, en efecto . c ua ndo yo te conte st é d
79a en ca m b io. s i c a rece de e llas. hec e poco so br e la figura, rechazábamos es e ti po de r es-
MEN. - Me pa rece q ue es nece sariame nte como d ice. pues ta q ue e m plea t érmi no s que aú n se es tá n buscando
SOco- ¿ No afirmábamo s hace un ins tante que ca da v so bre los c ua les no hay todavía acue rdo ~ .
una de el la s - la j us ticia. la se nsa te z y la s de más de es te: MEN. _ Y hací a mos bien en recha zarla s. Sóc ra tes.
tipo- e ran una parle de la vi r tud ? soc. _ E ntonces, q uerido. no c rea s tampo co t ú qu e
MEN. - Sí. mientras se es tá a ún buscando q ué es la vir tud como un
Soc. - Entonces. Menón, ¿ es tá s jugando conmigo ? tuda, podrás poné rsela en cl aro a a lguien co ntes ta ndo por
MEN. - ¿ Po r qué. Sócrates ? lI u ..dio de sus partes, ni q u e podrás por lo dem á s poner
SOc o- Po rq ue habiéndote pedido hace poco q ue nu e n cl aro c ua lq u ie r otra cosa con semejante p roced imí en-
partieras n i hicier as pe dazos la virtud. y habiéndo te da . ro. Es menester, pues. de nuevo, replantearse la mi sma
do ejemplos conforme a los c ua le s tendría s que haber con. pregun ta: ¿q ué es esa virtud de la que di ce s la s cosas que
testado. no ha s pu est o atención en ello y m e dice s que la d ices ? ¿O no te parecen bien m is palabras ? e
virtud consi ste en pr ocur a r se co sas buenas co n justicia, MEN. - Me parecen pe r fec t a me nte bien.
b ¡y de ésta afirma s qu e es un a parte de la virtud! Soc . _ Responde entonces otra vez desde el princi pio:
MEN. - SI , cla ro. J. q ué afirmáis q u e es la virtud tú y t u a migo ?
s oc o- ¡Pe ro de lo q ue tú admi tes se despr ende q ue la MEN. _ ¡Ah... Sócrates! Ha bía oído yo. aun a nte s de en-
vir tud con si ste en es to: en ha cer lo que se hace co n un a com rar m e co nt igo, q ue no ha ce s tú otra cosa q ue proble-
parte de la virt ud! En efec to, a fir mas que la justic ia es ma tizarte y problematizar a lo s demás. y ahora, según me 80a
u na pa rl e de la virtud y lo m ism o ca da u na de las otra s. pa re ce, me estás hechi zando, embruja ndo y has ta e ncan-
Digo esto, porque hab iéndote pedido que m e ha b la r as de landa por completo a l punto que m e has reducido a una
la vir tud co mo u n todo. estás m uy lejos de decir q ué es: ma deja de co nfus io nes. y si se m e pe nn ite ha ce r u ~a pe-
y en camb io a firmas q ue toda acci ón es virtud, s iem pre quena brom a. d iña qu e eres pareci dí simo, por t u ftgura
qu e se r ea lice co n u na pa rt e de la virtud, como s i hu bi e- co mo po r lo demá s. a ese c ha to pe z m arino, e l to r pedo .
ras d icho qué es e n gene ral la virtud y yo ya la conoc iese, Ta mbién é l, e n e fec to. e nto r pece a l que se le acerca y lo
e au nq ue t ú la tengas desp edazada en partes. Me parece en- loca , y m e parece qu e tú ahora has producido en mi .u n
to nce s necesario. mi q uerido Menen, que te vuelva a re - r esu lta do se m ejante. Pues, e n verdad, estoy entorpecido b
pla ntear de sd e e l pr incipio la mi sma pr eg u nt a «q ué es la de al ma y de bo ca. y no sé q ué r es ponder te. Sin e mba rgo ,
vi r tud » y si es cie r to q ue toda acció n acompañada de una miles de veces he p ronunciado innume r abl es di scu r sos so-
pa r te de la virtud es vi r tu d. Po rque ése es, después de to o bre la virtud, t ambién de lante de muchas pe r son as, y lo
do. e l s ignific a do que tiene e l decir que toda a cción he- be hecho bi en, por lo menos así me parecía. Pero ahora,
cha con ju stici a es virt ud. ¿ O no te parece qu e haga falta
r e pe t ir la mi sma pre gunta . s ino que crees qu e c ua lq u ie r a
16 . cr. 75d.
M E NÓ N 30 1
300 DIÁL OGOS

por el cont ra rio. n i siqu ie ra pu edo decir qué es. Y me pu teje r: q ue no le es posible a nadie bus ca r ni lo que sabe
rece q ue ha s procedid o bien no za r pa nd o de aquí ni re s! ni lo q ue no s a be? Pue s ni podría busc a r lo q ue s abe
d ie ndo fu era: e n c ua lq ui er otra ci udad, sien do ext ra nje -c puesto que ya lo sabe, y no hay nece sida d a lgu na e n to no
ro y ha ci e ndo se me ja nte s cosas, te h u b ieran r ec lu ido p O I lC S de b úsq ueda-e, ni ta m poc o lo qu e no sabe -puesto

brujo. q ue , e n ta l caso, ni sa be lo que ha de bu scar- o


SOco- E res ast uto, Men ón , y por poco me hubieras M EN . _ ¿ No te pa rece, Sócrate s . que ese razona m ien- 8 1a

e ngañado. tu está correctamente hec ho ?


M E N. - ¿ y po r q ué, Sócrates? SOc o- A m í no.
e Soc. - Sé por qué motivo has he cho esa comparación M EN. - ( Pod rí a s de ci r por q ué?
conm igo . SOC. _ Yo sí. Lo he o íd o. e n efecto. de hom bre s y m u-
MEN. - ¿ y por cuál c rees? je re s sa b ios en asun tos d ívtno s .; n.
SOC. - Pa r a que yo haga o tra c o ntigo. Bien sé qu e a MEN. - ¿Y qué es lo que dicen ?
todos lo s bello s les pla ce e l ve r se co m pa r a dos - les fa vo- Soc. - Algo ve r da de ro , me parece. y también be llo .
rec e, sin duda. porque bellas son , creo, tam bién la s im á- M EN . - ¿ Y qué e s. y quiénes lo dicen?

genes de lo s bell os-; pero no ha ré ninguna c om pa r ación soc. _ Los que lo dicen son aquellos sa ce r dote s y sa -
c o ntigo. En c ua nto a m i, si el to r pe d o. estando é l e ntor- ce r dc t tsa s que se han oc u pa do de se r capaces de ju stifi·
pec ido. hace a l mismo tie m po q ue los demás se entorpez- car e l o bjeto de su ministerio. Pero también lo d ice Pín-
can, entonce s le as e mejo; y si no es así. no. En efecto, no daro y muc ho s otros de los poetas divinamente in spi r a-
es que no te niendo yo problemas, problematice sin ern- dos. Y las cosa s que dicen so n é s tas - y tú pon atención b
bargo a los dem á s ", s ino que estando yo to ta lm ente pro- si te pa rece que dicen ve r dad-e : a fi rman, e n ef ec to, que
a blematizado, ta m bié n ha go que lo esté n los dem á s . Y a ho- el a lm a del hombre e s inmortal. y que a vec e s termina de
r a, «q ué es la virt ud ». ta mpoc o yo lo sé; pero tú. e n cam- vivir -lo q ue llaman m ori r- , a veces vuelv e a re na ce r ,
bi o. ta l ve z sí lo sa bías a ntes de po nerte en co ntacto co n- pc ro no pe re ce ja m á s . Y e s por eso por lo q ue e s nece sa -
mi go. aunque en es te mo me n to asemejes a q u ien no lo sa o rio lleva r la vida co n la m á xim a santidad. po rq ue de
be. No o bstante, q u iero inve sti gar co n tigo e indagar qué q uie nes...
es e lla. t'ers éíone el pago de antigua condena
M EN. - ( y de qué m a ne r a bu sc a rá s. Sócr a te s , aque-
haya recibido. hacia el alto sol en el noveno año
llo que ignora s tot alme nt e q ué es? ¿C uál de la s cosas que el alma de ellos devuelve nu eva men te,
ignora s va s a propone r le co m o o bje to de tu bú squeda ?
de las qu e reyes ilu stres c
Porque si di era s e fect iva y ci e r tamen te co n e lla, ¿cóm o
a dve r tirás. en efecto. q ue es é sa q ue busca s, des de e l mo-
men to qu e no la conocías? n W . K. C. G UT HRIE (Plato. Prolagoras an d Men o, Ha r mun d swo r th ,
e SOc o- Comprend o lo qu e q ui eres decir, Men ón. ¿Te 19 56. pág. 129) señ al a qu e ha y segu rame n te a qu l un a p au sa y u n ca m b io
d ~ ton o , que se hac e m ás so lemn e en lo que sigue . El m ism o au tor sus tie-
da s cuenta del argum e nto e rís t ico que emp iez as a e ntre-
Il e que el pa saje refleja conce pcion es órfic as . (Cf. Orpheu s and Greek Re·

17 En griego se ju ega en tre eúpu ron (no te nien do p rob lema s) yapo- (¡¡¡ion = O ríeo y la reli gión g riega [trad . J. V AI. MARD), Bu en os Aire s, 1970,
refn (p roblcmat iza r). ¡'"l!". 167 .)
302 DIÁLOGOS M EN ÓN 303

y varones pleno s de fuerza y en sabid u ría insignes 01 ~ mos tra r me que e n efect o es as! co mo d ices, mu es t ra-
surg irán. Y pa ra el Testo de los tiempos héroes sin má cfll'h 1111'10 .
por los hom bres se rán llam ados 21>. SÓl.:. _ ¡Pe ro no es fáci l! Sin e mba rgo , po r t i estoy d is-
pu" sto a e m peñar me. Llámame a u no de tus numeroso s
El alma. pues, s ie ndo in mo rtal y ha bie ndo naci do mu W I vtdo res qu e es tá n aqu í, al que qu ie ras, para qu e pue- b

c ha s veces, y vist o efect iva men te tod as las cosas, ta nto lo 1111 dem ost rártelo con é l.
de aq uf como las del Hades. no ha y nada que no hay. M E N. _ Muy bien. (A un servidor¡ Tú , ven aq u í.

aprend ido; de modo que no ha y de q ué asombrarse s i c. S6c. - ¿ Es gr iego y habla griego?


posib le que recuerde. no só lo la vir t ud. s ino el rest o de MEN. _ Perfectamente; nació e n m i casa .
d la s cosas que, po r cie rt o . a ntes ta m bién conocia. Est án Soc. _ Pon enton ce s a te nc ión pa ra ver qué te parece
do. pues, la natu raleza tod a emparentada co ns igo m~, lo que hace: s i recuerda o est á aprend ien do de mí.
el
y habien do "a lmaa¡;;.e nd ido todo. na<b"im pide que quien MEN . - Así ha ré.
Soc. - (Al servidor.) Dime enton ce s, m uc hacho, ¿cono-

I
recuer d e una sola cosa -eso que los hombres lla man
a pren de r-o encuentre él mismo todas las demás, si es va. I es que un a s uper fic ie cuadrada es una figura asl ? (La

leroso e infat igable en la búsqueda. Pue s, en efecto, el bus- ,Iilmja.)


car y el aprender no son otra cosa, en suma, que una SERVIDOR . - Yo sí.
I reminiscenc ia . Soc . _ ¿ Es , pues, el cuadrado, una su perficie qu e ríe-
No debemos, en cons ecuencia, dejarnos persuadir por 11" tod a s es tas lin eas ig uales, que son c ua t r o? e
ese a rgumento erís uco. Nos volverí a indolentes, y es pro- SERVIDOR. - Perfectamente.
~ p io d e los débiles escuc ha r 10 ag rada ble; este otro, po r el soc. _ ¿ No ti enen ta m bién igua les éstas trazadas por
con tra r io, no s ha ce la boriosos e indagado res. Y porque 1·1 medio J//?
con ffo e n que es verdad ero, quiero buscar contigo en qué SERVIDOR. - SI.
cons is te la virt ud . SOC. - ¿ Y no podría u na superficie como ésta se r rna -
MEN. - Si, Sócrates, pero ¿cómo es q ue d ices eso de yor o me nor )' ?
que no a pre nde mos, si no que lo que denominamos a pren- SERVIDOR. - Desde lu ego.
de r es remini scen ci a ? ¿ Pod rías enseña r me que es así? JO Al cu ad rado inic ial (ABe D), Sócrat e s a grega la s Ilneu E F y C H.
Soc. - Ya te dí je poco a ntes , Menón, qu e e res talma-

:E8
8 2a do ; a hora preg unta s s i pu edo e nse ñarte yo, q ue esto y e ñr- G
mando que no ha y enseñanza, sino rem inisce nci a, e viden- J
temente para hace rme en segu ida caer en con tradicción
conm igo m ismo . o :
MEN. - [No, por Zeu s, Sócrates! No lo dije con esa in-
len ción, sino por cost um b re. Pe ro, si de algún modo pue - , " e

2'0 La cita se a tribuye a PtNIM RO, fr. 137 (TU RYN) = 127 (BOWRA) = 133 I1 Sócrates seg uramen te se ña la , p rimero, el cua drado mayo r (ABCO)
(SNELL). y, de sp ués, a lgu no de los menores (p. ej .: AHOE, HBFO, EOGO. erc.j.
304 DIÁLOG OS M EN ÓN 305

S Oco- Si e s te lado fu era de dos pi es y este ot ro nurt f..h ,N. - Cla ro que no.
bien d e dos, ¿c uá n tos p ie s tend rí a e l todo Jl? Míra lo 1,_1 xoc. _ ¿ Pero c re e que es el doble de la otra ?
si fuera por aquí de dos p ies. y po r allí de uno solo Jl,¿ " MI'.N. - Sí.
se r ia la s uperfici e de una vez dos p ies " ? Soc. _ Obse rva cómo él va a ir reco rda ndo e n se g uí-
S ERVIDO R. - S i. l lll , como hay, en efec to, que recordar.

d S OC. - Pe ro p uesto q ue es de dos pies ta m bi é n aquí (A/ se rvidor] Y tú, dime : ¿afi r mas qu e de la linea do-
¿qué ot ra cosa que do s veces dos res ulta ? hlrse fo rma la s upe rfici e dob le? Me refie ro a una s upe r- 83a
SERVIDOR. - A sl es . Ih il' que no sea la r ga po r aq uí y ca r la por allí , s ino que
SOco -¿ Luego re sult a. c ie rtamen te . dos veces do 1'11 igua l po r todas parte s, como és ta, pe ro el dob le que

pi es ? wtu, de oc ho pies. Fíjate s i toda vía te pa rece qu e re sul ta -


S ERV IDOR . - Si. . 11 el doble de la linea.
Scc. - ¿C uán to e s entonc e s dos vece s dos pies ? Cuén S I'.R V IDOR. - A mí sí.
ta lo y d ilo. Soc. _ ¿ No result a és ta el doble que aquélla , s i a g re-
SERVIDOR, - Cuatro, Sócrates. 1l.11l 110S d esde aquí otra cosa as¡ JI> ?
S OC. - ¿ y podría habe r o tra superficie. e l do bl e de C8 SERVIDO R. - Por su puesto.
la, pero con una fi gura similar, es decir. teniendo toda SOC. - ¿ y de ésta " , afirmas que resultará u na super-
la s lineas igua les como és ta ? Hele de oc ho pies, si ha y cuatro de ellas iguales ?
S ERVlOOk . - Sí . SI'.RVIOOR. - S I. b
Soc. - ¿Cuá ntos pies tendrá ? S6c . _ Dibujemo s, pue s, a part ir de ella , cuatro igu a-
SERV IDOR. - Och o . les JI . ¿No se ria ésa la superficie de ocho p ies que tú
SOc o- Va mos. t r a ta a hora de decir me cuál se rá e l la r- .rürmas ?
e go qu e tendrá cada un a de sus lineas. Las de és ta ti en en
G
do s p ies, ¿ pe ro la s de ésa que es doble ?
SER VIDO R. - Evidentemente, Sócrates, e l doble JI .
Soc. - ¿ Ves. Men ón, que yo no le en seno nad a, sino o
que le pregun to todo. Y a ho ra él c ree s a be r c uá l es el lar-
go del lado de l que re sulta rá una s up e rfic ie de ocho pies,
¿o no te pa rece ? •'---.....,!;-- -!----,J
M EN . - A mi s i.
H
. t Sl:lo (AJ); . aQuellh (AB); . o tra. (BJ ).

Soc . - ¿Pe ro lo sa be ? 11 La lln ea AJ.

1> Los grie gos n o d is po nlan d e un térm ino para refer irs e a pies
c ua d ra dos .
lJ Sóc ra tes co mpa ra un o de los lado s del cu ad ra do may or (p. ej.: BC)
co n ot ro de la flg ura me no r {p. ej .: e l AE de la figu ra ABFE}.
"
r-=
-T
DE[j
}O Es de cir, dos pin cu ad rados.
)S Obvi amen te, la re s pue sta e s e qu ivoc a da. A a J
306 Dl ALO GOS M ENÓN 307

SERVIDOR. - Po r s upuesto. Soc. - Bien. ¿Pe ro la de ocho pies no es e l dob le de


S6c . - ¿ Pe ro no h ay en e s ta s upe r ficie estos c ua t ro ~Iuy la mi ta d de és a ' l?
cuad ra do s, cada un o de los c uales es igu a l a ése de c un S ER V I DO R. - S I.
t ro pies J9 ? SOC. _ ¿ No resu ltará en to nces u na lín ea mayor qu e és-
SE RV IDOR. - Sí. tn, pe ro meno r que ésa ' J, o no ? d
Soc. - ¿ De qu é ta ma ño re su lta rá e ntonces? ¿N o el S ER V I DOR . - A mi me pa rece que si.
c uatro veces ma yor? S6c . - ¡Muy bien !, pue s lo q ue a t i te pa rece es lo qu e
SERVI DOR . - Desde luego. de bes contesta r. Y di me: ¿esta línea no e ra de dos pies y
Soc. - ¿ y es doble lo q ue es c uatro veces m a yo r ? J'~a de cuatro?
SERVIDOR. - [No, po r Zeus! S E R V IDOR. - Sí.
Soc. - ¿Cuánta s veces e ntonces? Soc. _ Entonces es necesa ri o que la lin ea de la s uper-
SERVIDOR . - E l c uád r up le. Ite te de oc ho pies sea mayor que ésta, que ti ene do s pies ,
e SOCo- En to nces. de la linea doble, muchacho . no re- V menor que ésa, que ti en e c uatro.
sult a una superficie doble sino c u ád r uple. S ER V I DO R. - Es necesario .
SERVIDOR. - Es verdad . . SOC. - Trata de decir qué largo afirmas que t endrá. e
Soc o- y cuatro veces cua tro es di eciséis. ¿no ? SE R VID OR. - Tres pies.
SERVIDOR . - S I. Soc . - Si ha de ser de tres pies , ¿agrega mos la mitad
SOC. - Entonces la superficie de oc ho pies, ¿de cuál de és ta " y tendrá tres pies ? Po rque é sos so n dos pie s, és-
lín ea re sulta ? De és ta " no s ha res ultado el cuádru ple . l e , uno; y por aquí . igualmente, dos éstos y uno és te, y asl
SERV IDOR. - Eso digo. resu lta la s upe rfici e que tu afir mas. (Sócrate s completa
Soc. - ¿ y es ta c ua rta pa rte resulta de la m ita d de es- rl cuad rad o AZPQ '~.)
ta línea aq uí "? SE RV IDOR. - Si.
SERV IDOR. - Sí. soc. _ De modo qu e s i tiene tres por aquí y t res por
1l1lJ, ¿la su pe rfic ie total resulta t res veces t res pies ?

'" Sóc ra te s a grega a l d ibujo a nt e rio r la s lineas CM y CN co n lo q ue


re s ulta la s igu ie nte f igura:. u . f:Sla . (ABCD). . ésa . (AJ KL).
H . t ua_ (AS)• •és a _ (AJ ).
u La mi ta d d e BJ .
., . Ews. (AB)••és te. (S Z), -é s tc s s (AD)• • és te. (DQ). La figu ra re -
su lta n te es:

~Et]
4" De AJ.
O] ABCO es la c ua rta pa rte d e AJ KL. y ÁB la mi tad d e AJ.
'[lIT
A B Z J
308 D IÁLOGOS ME NÓN 309
SERVIDOR . - Evidenteme nte . Soc. - ¿ Crees acaso q ue él h ubiera tr at a do de b us car
Soc. - Tr es veces t re s, ¿ c uá ntos pies s o n ? .,. a prender es to q ue crei a que s a bía, pero ig no r a ba , antes
SE RVIDOR . - NUev e . tic ve rse p roblematiza do y convencido de no sa ber, y de
Soc. -¿ Y cuá nto s p ies t ie ne la superfici e del do ble? ~ 1' ll t i r e l deseo de s abe r ?
S ER V ID OR. - Oc ho. M EN. - Me pa rec e que no, Sócrates.
Soc. - En ton ces de la lin ea de t res pies t a m po co de r i- Soc. - ¿ Ha ganado, entonces, a l ve rse en to r pec ido?
va la s upe r ficie de ocho. M EN. - Me pa re ce.
S ERVIOOR. - De sde lue go que no . SOC, - Observa ahora, arrancand o de este proble ma.
Soc. - Pe ro e nto nces, ¿de c uá l? Tra ta de de c ír no sle q ué es lo que ef ec tivamente va a e nco ntra r, bu scando con- d
84a con exac t itud. Y si no quieres hacer cálculos. m ués tranos- m igo, sin q ue yo ha ga más q ue preguntar, y sin en se ña r-
la e n el di bujo . le. Vigila po r si me coges e nseñándo le y e xplic ándole e n
S ERVIDOR. - [Por Zeus!, Sócrates , qu e yo no lo sé. lugar d e inte r ro ga rl e po r s us propios parece r es.
SOC. - Te da s cue nta una vez más, Menón, e n qu é puno (Al servidor¡ Dime entonces t ú: ¿ No tenemos a q u í una
to se encuen tr a ya del cam ino de la r em in iscenc ia j por - su pe r fic ie de cu a t ro pi e s " ?
que a l princ ip io no sa bia cu ál era la line a de la sup erfici e S ERV I DOR. - S í.
de oc ho pi es. co mo tampoco aho ra lo sabe aún; sin em- SOC. -¿ Podem os agre ga rl e a ésa o t ra igua l n?
bar go, c re la ento nces sa berl o y re spo ndí a con la seg uri- SER VIDO R. - S í.
dad prop ia del qu e sa be, cons id er a ndo q ue no h ab la pro- S Oe. - ¿ y es ta t e rc er a, igual a c a da una de ésas"?
ble ma. Ahora, e n cambio, cons ide ra q ue está ya en e l pro- SERV IDO R_ - Sí.
blema, y como no sa be la re spuesta, tampoco cree sabe r la. SOC. - ¿ Na pod r ía m os co mpleta r, a demá s , este
b MEN. - Es verda d . á ngu lo .. ?
Scc. - ¿ Entonces es tá a ho ra en una m ejo r sit ua ció n S ER VJ[}OR . - Por s upuesto.
co n res pect o de l asunto q ue no sa bía? SOco- ¿N o r esultaría n entonce s es tas cuatro s uper-
M EN . - Así m e pare ce. licies igu a les ?
Soc . - Al pro b le m a ti zarlo y e ntor pe ce r lo, co mo ha ce S ERV iD OR. - Sí. ~
e l pez torpedo, ¿ le hi ci mos a lgún daño ? Soc. - ¿ y q ué ? ¿ El todo ést e c uántas veces es m ayar
. MEN . - A m í m e parece q ue no. q ue a q ué l 'II?
Soc. - Le hemos hecho, a l co ntrar io, u n benefi cio Pe- SERVIDO R. - Cuat ro veces.
ra resolve r cómo es la cuestión. Aho r a, en efec to, bu sca- Soc. _ Pe ro nosot ro s neces it ábamo s q ue fu e ra do b le ,
rá de buen g rado, pu est o q ue no sabe , m ie ntras q ue m uo ¿ no te ac ue r das?
chas veces ante s, delante de to dos, con tran qu ilidad, creía .. El c ua d ra do ABCn . Guthrie y Bluc k pien san qu e es p rohablc que,
e estar e n lo ci erto al habla r de la s uperficie doble y supo- c n este momen to, Sócrates bor re las figura s a nteriores o dib uje al lad o
ní a q ue ha bía q ue part ir de una s uperficie del dob le de de ellas una nu eva.
la r go . 01 DCNL.
o, CM KN .
M E N. - Ast parece .
•• El for ma do por los lad os se y CM.
su . :astc > (AJ KL); . a quél. (ASCO).
3 10 Dl ALO GO S MENÓN 3 11

S ERVIDO R. - Por supuesto . Soc. - ¿ De la que ha bíamos t razado de ángu lo a án-


Soc. - En tonc es esta línea qu e va de un ángulo a e rro. ~ ll l()e n la superfic ie de cu atro p ies ?
8Sa ¿ no corta e n dos a cada un a de estas s upe rficies SI ? SERVIDOR. - Sí.
SERV IDOR. - Si. SÓC. _ Los sofis tas j7 la llama n .. diagonal », y pu esto
Soc. - ¿No son c ua t ro estas lín ea s iguales qu e encte que s i ..di agon al . es su nombre, de la d iagona l se llega rá
rran esta superficie »? 1I ob ten er, como t ú d ices, servidor de Me nón , la su pe rf i-
SERV IDOR . - Lo son, en efect o. dI' doble.
Soc. - Observ a a hora: ¿q ué t ama ño ti e ne es ta SERVIDOR. - Po r su pues to qu e s í, Sóc ra tes.
s upe rfici e? SOC. -¿Qué te parece, Menón ? ¿ Ha contesta do él con
SERV IDOR. - No e ntie ndo. alg una opinión que no le sea propia?
soc. - De és tas. que son c ua t ro , ¿ no ha cortado cada MEN. - No, con las suy as . e
line a e n su interior la mitad de cada u na ? ¿o no ? 56c. - Y, s in embargo, como dij imo s ha ce po co, a n-
S ERVIDOR, - Si. II' S no sabía.
Soc. - ¿ y c uánt as de esas mitades hay en ésta l l? MEN. - E s verdad.
SERVIDOR, - Cua tro . Soc. _ Est as opiniones, enton ces, es taba n en él. ¿o no ?
SOC. - ¿ y cuá nt as en ésa )4 ? MEN . - Sí.
S ERV IDOR. - Dos. soc. - El que no sabe , por lo tanto, ace rca de las co-
Sóc. - ¿Oué es c ua t ro de dos ? sas que no sabe, ¿tiene opiniones verdaderas so bre eso qu e
SERVIOOR . - El doble. efec tiva mente no sabe ?
b Soc. _ ¿ y es ta su pe rfici e S\ ¿c uá n tos p ies tiene ? MEN. - Pa rece.
S ERV IDOR . - Ocho pies. Soc . _ y estas opin ione s que acaban de despertarse
S OC. - ¿De c uál línea ? aho ra, en él. son como u n su eno. Si u no lo s igu iera inte-
SERV IDOR. - De ésta w.. rroga ndo m uc ha s veces sob re esas mis ma s cosas, y de ma-
ne ras di fere ntes, te n la segur idad de que las acabarla co-
nociendo con e xac t itud , no menos q ue cualquier otro. d

l2jsr MEN. - Posib lemente.


Soc. - Entonces, ¿ llega rá a conoce r s in qu e nad ie le
e nsene, s ino sólo pregu nt á ndo le, rec uperando é l m is mo

DLS:czr
A e '
de sí m ism o el conocim iento?
MEN. -Si.
SOC. - ¿ y este recu pe rar uno el conoc imien to de sí
~¡ l a s uperficie OBMN . mi smo, no es recordar?
)J En OBM N. MBN. - Po r su puesto.
j. En ABCO.
)' OBMN.
l o Cua lquiera de las d ia gona les , pe ro , por lo que sigue, es, probable·

me n te, DB.
3 12 OIÁl. O GO S MENÓN 3D

S Oc o- E l co nocim ien to que ahora tie ne. i no es c ie r 11 1 llU rec uer de s- te po nga s valer osame nt e a bu sca rlo y a
que o lo a dq u ir ió . a c as o, a lg una vez o s iem p r e lo luvo ! . cc odcr!o.
M EN. - Sí. MEN. _ Me pa re ce q ue d ice s bi en. Sócrat es, a unq ue no
SOco- S i. p ue s, s ie m pre lo t uvo, en to nces srem p¡ . é por q ué. .
ta mbié n ha s id o u n co noced o r; y s i, en cam bio. lo adqu l Soc. _ A m í ta mbié n m e pa re ce, Menó n . Aun q ue e n lo
r ió a lgu na ve z, no se rá por c ie rto e n e s ta vida dond e lu ref e re nte a los de má s a spec tos, no in s isti ri a ta nto con es-
e ha a dq u ir ido. ¿ O le ha enseñado a lgu ien geome t r ía ? Por ll' d isc urso ; e n ca m bio , c re e mo s q ue es nec esa r io b usca r
q ue és te se ha de co m por ta r de la mi sm a m a nera c on c u1I1 lo q ue no se sa be para se r m ejores, m á s e sfo rza dos y me -
q ui er geom er r ta y co n to da s la s demás d isc ip lin as. ¿ Hay, 1I0 S ino pe rante s q ue s i c reyésemos que no co noce mos ni
tal ve z, a lgu ie n q ue le ha ya enseñad o todo e so ? Tu le n somos c a pac es de e ncont rar, ni q ue es ne ce sa r io busc ar.
drías , na t u ra lme n te , q ue sa be rl o. pue sto que nació en tu y por esto s í estoy ple name nte d ispuesto a luch a r , s i pu e - e
ca sa y en e lla se ha c r iad o. do, tan to d e pa la bra co mo de o bra. ,
M EN. - Sé m uy bien q ue nadie le ha enseñado nunca M EN. _ Ta mbién es to, Sócrate s, me pa r ece q u e lo d i'
Soc . -¿ T ie ne o no t ie ne esas o pin io ne s? res bi en .
MEN. - Ind u da blem ente la s t iene , Sócrates. SOC. _ ¿ Quiere s, pues, ya q ue e stamos de ac uerdo en
866 SOC. - S i no la s a dquir ió en es ta vida, i no e s ya evt- (lue hay que in daga r 10 que uno no sabe que intentemo s
dente q u e e n a lgú n otro ti empo la s tenia y la s habla en co m ú n buscar q ué e s la virt u d ?
apre nd ido? M EN. _ Po r su p ue sto. No obstante , Sócrat e s, yo pre-
M EN. - Pa rec e. fe ri rla, de sde luego. exami na r y esc ucha r lo que a l pr¡n-
SÓe. - ¿ y no es é se , tal vez, e l tiempo e n q ue él no er u ci pio te preguntaba, e sto es: s i hay q ue co nside rar la vi r-
to da vía un ho mbre ? tud co mo a lgo q ue es ense ña b le , o b ien como a lgo q ue se d
M EN. -Sí. da a los ho m br e s na t u ra lm en te o de a lgú n o tro modo .
soc. - S i, pue s, ta n to e n el t iempo en que es hom bre, Scc. _ Pue s si yo manda r a, Me nón, no sólo so b re m i,
co m o e n e l q ue no lo es, hay en é l opin iones verdadera s, sino también sob re ti, no inves tigaría mos prime ro si la vil"
que , de s pe r tada s m ed ia nte la in te rro ga ción, se conv ie r- ru d es e ns e ña b le o si no lo e s , sin an tes ha be r ind a gad o
te n e n fra g mentos de co noc im ie ntos, ¿ no habrá e sta do el q ué es e lla mi sm a . Pe ro, desde el m o m ento en que tú no
a lm a de él. en el tie m po que s ie m pr e d ur a , e n pose s ión in ten ta s m a nd a r te a t i m ismo - sin duda para co nt in ua r
del sa be r. Es ev ide nte, en efec to, que d urant e el transcur so s ie ndo Iib re - , pero in tenta s gober narm e a m i, y e n efec-
del tie m po tod o lo es y no lo e s un se r h um a no st o to me gobie rn a s, te he de c o nse nt ir , pues ¿ podrla a ca so
MEN. - Parece . proce de r de o tro modo? Pa re ce , por lo tanto , que h ay q ue e
b So c. - Po r ta nto, si sie m pre la verdad de la s cos as es- in vesti ga r có m o e s a lgo que todavía no sa bemos q ué e s .
tá en n ue str a a lm a , ella ha br á de ser inmo r t al. De modo Pe r o, no obst a nte , si no todo. déjeme un poc o de t u go-
q ue es necesa r io q ue lo que a ho ra no c onozca s - es decir, bierno y co nc éde m e q ue investigue mos si la virtud e s en-
señ ab le o có m o e s , y q ue lo hag amos a partir de un a
" Advi<!: r ta . e el emp leo de las d os e~p re s io n es refe r idas a l tiemp o: hipót esi s S~ . y d igo «a parti r de u na hipót e sis » ta l co mo
Ión uet c/'rónun (el tie mpo que dura siemp re) y ton pan ta chró non {e] tra nso
cu r. o del t iem po to do). Si . H ipótes is» s ign ific a pa r a Pla tón u n en u nci ado que s ir ve co mo
3 14 DI ÁLOGOS MENÓN 3 15

lo hacen fre cuentem ente los geó me tras al investigar . cuan un resultado, y s i, po r el con tr ar io, es im po s ibl e que eso
do a lgu ien les p regunta, s u ponga m os, a pro pó sito de unA suc e da , e ntonce s se ha de se gu ir o t ro. Y as í, pues, qu ie ro b
su perfici e. s i. po r eje mplo, es po sib le insc ribir co mo un yu ha cer una hipót esis para ver qué res ulta ac e rc a de la
t r iá ngulo esta s upe rficie e n est e círculo. Ellos corue stu inscripción de esta s uper fici e e n e l circulo, s i es pos ibl e
876 fl a n a s l: eNo sé todavla s i e sto es posib le, pe ro, co mo una u s i no lo es." Del m ismo m odo, tam bién noso t ros , a pro-
hipó tes is , c reo qu e p uede se r de u til idad pa r a e l caso In pósi to de la virtud, ya q ue ni sa bemos qué es ni qué cl ase
s igu ie nte: s i es ta su pe r ficie es ta l qu e, al aplicarla so bre de cosa es , debemos, partiendo de una hipó tesi s , examí -
es a línea dada del ci rc u lo, le fa ltase u na s uperfici e igunl nu r s i es e nseña b le o no, e xp resá ndo nos as í: ¿qué clase
a la q ue se ha a plicado " , m e pare ce que se ha de se guir dc cosa, de e ntr e aque llas co nce rniente s a l a lma, ha de se r
la vir t ud para qu e se a enseñable o no ? En primer lu ga r,
punto de pa r ti da o co nd ició n pa ra poder acepta r o rechazar ot ro . No U.. si es algo di stinto o semejante a l conocim ie nto, ¿ es ense-
ne, pue , . el sign ifica do mode rno de ~conjet U", a. ni es ta mpoco u n enun ña b le o no - o, como decíamos hace un momento,
ci ado q ue. en C Ullnl O lal, de ba se r 5Omcl id o a prueba. E s algo, en Plalón ,
que Se su·pone en el e xame n d e unac ue uión c uyo e studio no p ue de h. ,
rccor dab le- ? Pero es indiferente q ue u se mos c ua lq u te- e
cerse, s i no e s de ese modo. ni d e las d os pala bras; en fin , pues, ¿es enseña b le ? ¿ O no
00 El p..uje es di ficil y la traducción ap roximada. Pa ra sa be r, en es evi den te para c ua lq u ie r a q ue no ot r a cosa se enseña
pa rtieu la r, si PI.. tón lenia en su menle al gún teore ma de te rmín..do se ha n a los ho m b res s ino el co nocimiento ?
da do n umeros a s in terpre tac ion es. Pu ede ve rs e la n . 56 que se m íe¡a en
M EN. - A m í me lo parece.
la ~g. 36 de la edic ión de A. Rui l de Elvir .. (Pla lón. Menón, Mad rid ,1958¡
y co ns ullane e l a pt n dice q ue in corpora R. S. BLOCK en su edición del S óc. - Si la vi rtu d fuese un conoc im ie nto, evide nt e-
d iá loIlO(PI,uo 's Meno, Cam bridge, 1%1 , págs. 441-61 ). A pesar de qu e W. mente se ria enseñable.
K . C. G\lT HRIE a firma q ue «no es necesa rio comprender el eje mp lo pau M EN. - Por s up uesto .
cap ta r el mtto do hi po tt tico que Sócrates expone - (op. a L e n n . 28, pág . Soc. - Esto, e ntonces. lo he mos r esuelto r ápidame n-
140) - cos.. q ue. en parte, es d er t..- y de lo s s u ti l.,,, in tent o s d e ex pon e r
el teorema - co sa que , en pa rte . es ta mb itn ime re sa nt e-c-, c reo que no
te: si es as t, se rá enseñabl e; s i no es así, no lo se rá.
poten us a de u no de ellos OO ITlO d iámet ro de u n cí rcu lo q ue t i di b uja , Só-
c ra te s m uestra q ue e l triángulo cons iderad o c u b re elsemicírculo, mi e n-
tras q ue la o t r.. m ita d queda vacla; si puede cubri rse con un tr iángu lo
se me ja nt e a l prime ro y const ruido sobre la m isma line a da da , e n to nc es
,.., des p re nde ...; si no puede cu br irse, se se guirla que.... La o tra , a l . i, n i·
ríca do de l ejemplo : «ESlll ml» e n pre se n cia no de l en u nci ado d e un p ro-
ble ma , sino d e u n sim p le e sq u ema de m étodo: s i ta n ta s d i M: repand a s se
han p ro d ucido es que se h a q u erido leer e n t re las linea s. Pa ra Sóc rate s
se trat ab a la n só lo d e d a r u na ide a de l mé tod o q u e em p leará ra ra tra la r
la c u est ió n de lo s ca racte re s de la virtu d en las con diciones a no r ma les
deb en o lvida rse, po r s u co ns iste nc ia y s en c ille z, dos d e las ob servacio. qu e le hablan s ido im puestas por Men ón . Lo e sen cial es lo sigu ien te: p.
n es que a pu nta 1..~ubin en su traducc ión del M,mÓI1, a propósito de es te ej., s i la virtu d se ens eña y se transm ite , ha y, por una pa r te, maestros
pa saj e. Una se ref iere a la ín dole de la figu ra a ludida: «e nt re la s trazadas y disc tp ulos. y po r ot ra pa rt e, lo mi smo, dísctpulos y mae stro s: si la viro
anlerio rm en te, Sóc ra tes a lu de s in duda a aq ue lla en q ue, en el cua dra do tu d es só lo un a op inión re cta, h a llada por una bu ena fo rtuna, de u n lad o
de d iecist h pies, es tá in scr ito el de ocho; de los triá ngul os rec tán gul o s e stán lo s padres , personas de b ien, pero, co n los h ijo s, el ot ro la do qu eda
que la figu ra p re sen ta, los q ue So n int e riores al prime r cua drad o y e xte. vacto.• (Lo ROBIN, Pla lo n, OeUVTeS co m pletes, vol. 1, Pa r ta, 1950, págs .
riores a l segun do s on lo s q ue merecen especia l atención; toma nd o la hi- 1292-3.)
3 16 DI ÁLOGOS M ENÓN 3 17

MEN . - Por supuesto . Soc. - In vesti gu em os también las que se refieren al


soc. - En segundo luga r, en tonces tenemos que ínvco. alma. ¿ Llamas t ú a a lgo sens at ez, ju st ici a, valor, facilidad
liga r, por lo qu e pa rece, s i la virt ud es u n conocí m íem« pa ra a prender, me mo ri a , magnifice ncia, e tc.?
o es a lgo d is t into de un conoci m ien to. MEN. - Y o s í.
d MEN. - Ta mb ién a m í me pa rece q ue de s pués de aque Sóc. - Obse rva entonces c uá les de és tas te pa rece que b
110 hay que invest iga r es to. IlU son u n co nocim ien to, s ino al go d isti nto del conuc imien-

SÓc. - ¿ Pe ro qué ? ¿No deci mos que la vir -tud es un 11): ¿ no es cie r to q ue, en unos casos, dañ a n y, en otros, so n
bien , y no es és ta u na hipótesi s fir me para nosot ro s ? miles ? Por ejemp lo, el valor: si no fu e ra disc e rnim íe nto »
MEN. - Po r s upuesto . el valor, sino una sue r te de te me ri dad, ¿no es cie r to que
Soc. - Pe r o s i ha y, ad emás. algú n otro bien , sepa ra. cuando un h omb re es te me ra ri o y ca rece de jui cio, reci be
do del cono cim iento, q uizá la vi r t ud no se r ía un conoci- daño, m ie ntra s qu e saca provec ho, en cam bio, c ua ndo t ie-
m ie nto; en ca m bio, s i no ha y n ingún bien que el conocí- ue ju ici o?
mient o no a ba rque. entonces esta blecie ndo la hi pót esis de M EN. - Sí.
que es a lgo que t ie ne que ver con el conocim ie nto, proce- Soc. - ¿ Ent onces también sucede de es te mod o con la
deríamos correctamente. sens a tez y la faci lidad para aprend e r: si una es a pren di-
M EN. - Así es. da y la otra ejerc itad a, y ambas 10 son con juicio, en ton-
Soc. - ¿ y po r la virt ud so mos bue nos ? ces so n út iles; sin ju ici o, da ñinas ?
M EN. - Sí. MEN . - Segura me nte.

Soc. - ¿ Y. s i bue nos, ta m bién útiles? Pu es tod o lo bue- SOC. - En suma, pues, ¿t odo lo q ue el al ma emp re nde e .
e no esú til, ¿ no ? y e n lo que pe rse ve ra, c ua ndo el dis ce r nimiento lo guia,
MEN. - S í. aca ba con felici da d; si 10 ha ce el no-d isc e rn im ie nto , aca-
Scc. - ¿ y la vi rt u d es a lgo ú til? ba en lo con tra ri o ?
M EN. - Necesar ia me nte , segú n lo que a dmi timos. M EN . - Pa rece.
SÓc. - Invest iguemos, pu es, rec u pe r ándol a s una por S óc. - Por lo tanto, si la vir tu d es algo qu e es tá e n el
un a, c uá les son las cosas q ue nos son útile s. La sal ud, de- alma y que necesa r iame nte ha de se r útil , ti ene que se r
ci mos, la fuerza, la be lle za y has ta la r iqueza ta m bién. Es- d isc e rnim ie n to, pues to q ue tod o lo co nce rn ie nte a l a lma
ta s y otras por el est ilo decimos que son ú til es, ¿ no ? no es, en s í mi sm o, ni útil ni da ñino , sino que, conforme
M EN. - Si. vaya acompañado de d isce rn im ien to o no, resultará ú t il
88a SOC_- Pero estas mi smas cosas decimos que también, o dañino. Por este a rgumento, pues, si en do la virtud útil, d
a veces, no s dañan, ¿o afi rmas tú algo disti nto ? ti en e que se r una fonna de di sce rnimi e nto .
M EN. - No, s ino así. M EN . - A mí ta m b ién me lo pa rece.

Soc. - Ob se rva a ho ra, ¿q ué es lo q ue guía a cada una SOco- Y, e n efec to, con la s d e má s cosas q ue hace u n
de es as cosas c ua ndo nos s on út iles y qué c u a nd o nos da- mom ento menci oná ba mos - la riq ue za, et c.-, qu e, un as
ña n ? ¿ No es ciert o, ac aso, q ue son titiles c ua nd o ha y u n
uso correc to y que, en ca m bio, da ña n c ua ndo no lo hay ?
. , He mant enido sie mpre:co mo tra d ucció n de phní ne5i5la pala bra
MEN. - Po r s upuest o. .
di5ce rnimien lo.
3 18 IlI ÁLOGO S MENÓN 3 19

vec es, so n buenas y. otras , dañ inas. ¿no sucede tamb ten mayor c ui da do qu e a l oro, para que na die los ec hase a per-
q ue, lo mi s mo q ue con re specto al r est o del a lm a " , I dc r y pu di e ran, un a vez alcanzada la e dad co nve nie nte,
d iscernimiento. sirv ie ndo de gula, ha ce. corno vimos, úu ce r útiles al Est ado.
les las cos as del a lma misma - mient ras que el nu MEN. - Proba b le m en te, Sóc r ates.
d isc ernimie nto las hace dañinas- odel mismo modo el jll Sóc. - ¿S i los bu enos, por ta nto, no lo son por natu-
t ma, us ándolas y co nduciéndola s correctamente la s hül t ra leza, lo llegarán a se r por a pr en diza je ? e
út iles, e incorrectamente, d añ in as ? MEN. - Me parece q ue no ha y ya o t ro reme dio s ino q ue
M EN. - Po r su p u esto. "ca así: además, es evi de nte, Sócra tes , qu e es enseñable ,
Soc . - ¿ y correctamente gu ia el a lm a r a cio nal. e 111 ccgú n n ues tr a hipótes is de q ue la virt ud es conocim ie nto.
co rrec ta me nte, la irrac io na l ? Soc. - Ou izás , lpo r Ze us!, pero ta l vez no es tá ba mos
M EN. - A sí es. en lo cier to a l admit irla .
Soc. - En tonces. pu ed e decirse así. en ge ne ral : todo MEN. - Pe recí a . s in e mba r go, hace poco, q ue la decía-
para e l hombre depende d e! alma. mientras que lo qu e " JI tl1 0 S bie n.
rel a tivo al a lma m isma depende del disce rn imientu para SOC. - Pe ro no ti ene qu e pa r ece r bie n di c ha sólo an -
89a ser bueno; y, po r lo tanto, según es te razonam iento, lo ú til tc rior mente, sino ta m b ié n a ho ra y después, si qu ie r e ser
s e ri a di scernim iento. ¿ No afir ma mos a caso que la virtu d váli d a.
es ú ti l ? M EN . - ¿Y en to nces qué ? ¿Qué obst á cul o e nc ue nt ras d
M EN. - Po r supuesto . y po r q ué sos pecha s que la virt ud pueda no ser un
Soc . - En to nce s concluya mos a ho ra q ue la virtud es conocimi e nto?
d iscern im ie nto, ya to do o pa rt e de él u. Soc. - Te lo diré, Me nó n. Sobre e q ue es e nse ña b le, s i
MEN. - Me parece, Sócrates , qu e las co sa s q ue ha s di. es un conoc imiento », no reti ro mi parec e r de qu e es té bien
c ho está n bien d ichas. d icho; pe r o so bre <qu e s ea u n conoc im ie nto », o bserva tú
SOC. - En tonces, si est o es as í, los bu enos no lo ha n s i no te parece veros ími l sospech a rl o. Dim e, e n efecto, si
de se r por naturaleza . cualqu ier as unto fue ra enseñable, y no sólo la virtud, ¿no
b MEN. - Me parece que no. se ri a ne cesario q ue de él hubie ra tambié n m aest r os y
Soc. - Ade m ás hubie ra sucedido lo si gu iente: si los d iscí pulos ?
bu e no s lo Fueran po r na tu ra le za , te ndría mo s que haber MEN. - A mi me lo pa rece.
tenído perso na s q ue efec t iva me nt e r ec o noc ie ran , de e n. Soc. - S i, por e l cont ra r io, e ntonces , de a lgo no ha y e
tre los jó ven es, los q ue so n bue nos por natura leza ; y no- ni maest ros ni d isc ípulos, ¿co njet u r a ri a mos bien acerca
s ot ros, por o t ra pa r te, no s ha br ía mos apoderado de est os de e llo s i s upus ié ra mos q ue no es e nseña ble ?
últ ímos , co nfo rme a las ind icaci on es de aq ué llos, y los ha. MEN. - Asl es ; pero, ¿ no te parece qu e ha y m a estros
b rla mos c ust odia do e n la acrópo lis " , m arcá nd ol os con de vi rtud ?
.2 Lo qu e no es d iscernim ien to . soc. - A m enudo, po r ci e r to, he bu sc a do s i hab r ía ta-
tl El razo na mient o, obvtemente, es esr: lo ú ti l es d iscernim iento ' la les mae s tros, pero, no o bs tante todos m is esfu erzos, no lo-
vir tud es u ul: por lan lo, la vi rtud es di sce rn im ien to . . g r o encont rarlos. Y Jos busco, sin embargo, junto c o n m u o
.. En Atenas. como en otras ciud ades , los tesoros públicos se gua ro
d ab an e n los tem plo s de la acrópoli s. chos ot ro s, so bre to do entre aq ue llos que c re o que so n e x-
320 DIALOGOS MENÓN 32 1

pertos e n e l as un to... ¡Pero he aquí, Menón , que p n't'il AN ITO. - Por sup uesto.
m e n te ahora , e n el momento m á s oportuno, se ha scru SOC . _ y si qu isiéra mos, e n ca m bio, qu e fuese u n buen
do j u nto a no sotros Anito ! ¡Hagá mos lo pa rt íc ipe de nu . upnte ro. ¿ no lo encomendaria mo s a lo s za pa te ros?
90a tr a búsq uedat, qu e proc edere mos bien al hacerl o. En l'll" AN. - Sí.
lo , Anito . e n prime r Juga r. es hij o de padre r ico y háhil Soc. - ¿ y así con los demás ?
Ante rni ón ", q ue e nrjq uec t ó no po r obra del a zar ni de ni AN, - Por supue s to.
gú n legado - co mo le acaba de suceder a ho ra a Ismenüe SOC. _ Dime e ntonces, volviendo nueva mente sobre es-
de Tc bas », que rec ibió los biene s de Polrcrates .' - , slno lo: e ncome ndán do lo a los médicos, hari am os bien s i q ui-
lográndolos con su sa be r y su dil igen cia; e n segundo lu viéra mos que fue se un bu e n méd ico. Pero c ua ndo deci mo s d
ga r, en cua nlo a l resto del carácter del padre. no se ha m UI n o , ¿es ta mo s sos te nie ndo lo s ig uie nte: q ue e ncome ndán-
trado éste nunca como un ci udadano arrogan te, ni engrer dolo a e llos obraríamos se nsa tame n te s i lo ma ndá ra mos
do , ni intratable, s ino , por e l cont ra r io, como un hombr f mejor a los q ue ejercen la profesión que a los que no , a
mesurado y amable; en te rce r lu ga r, c ri ó y educó bien iI los qu e pe rciben una remuneración po r este servicio y que
b s u h ijo. a ju ic io d el pueblo ateniense. ya que lo eligen, ('11 se decla ran maestros del qu e qu ie re ir a aprender? ¿ No
efe ct o, pa ra las más altas magistraturas. J ust o será, PUCI , uhrar la mos bien s i fijáramos nuestra atención en estas
buscar con pe rson a s como éstas los maestros de vir tud cosa s?
qu e ha ya o que no haya, y cuáles son. Indaga entonces con AN. -SI.
nosotros, Antro, conmigo y con t u huésped Menón, aqul SÓe. _ Entonces con el arte de tocar la flau ta y con
presen te, ace rca de es te asunto: cuá les p ueden se r lo~ la s dem ás, ¿ no s ucede rá lo m ismo ? Sería m ucha incons- e
maestros. Y haz, po r eje m p lo, estas consideraciones: si cie ncia el quere r que a lgu ien se haga fla uti sta y no enco-
e q ui siéramos qu e Men ón fuese un bue n médico, ¿a qué men darlo a los que p rome t en enseñ a r ese arte y perci bir
maest ro s lo e ncome nda rí a mos? ¿No seria a los médicos ? por e llo un a rem u neración, y. e n camb io , causa r mol es-
tia s a quie ne s n i p ret enden ser maest ros ni t ienen un so-
65 Apart e de un esco lio a l Eutifrón, q ue lo menciona como derivan. lo d iscl p ulo del saber que nosotros cons ide ramos di gn o
do s u fo rtuna de l tr a bajo o co me rc io con lo s c ue ro s, es tas son las ú n ic.. de a pre nde r de aquel al qu e lo e nc omenda mos. ¿No te pa -
rel e rencias que se uenen de l pa d re d e Anito. Pero ha y que tomar con cu lo
dado es to s da to s, po rque, como seña la bie n A. C RO IS ET•• PLa tó n se en tre- rece que se ri a una gran tontería ?
tiene en e l e lo gio de Ant em ión s in d uda pa ra su b ra ya r u n co n traste en , AN. - Sí , ¡por Ze us !, y también una ignoran ci a .
t re pad re e h ijo y hace r de este , po r un e1eclo de iro n ia , como u n ejemp lo SOC. - Dices bien . Ahora, en tonces, es posib le qu e me 9 10
e n apo yo de la te sts q ue Sóc ra tes ha de sos te ne r' (Piaron, (ku vres como a yud es a delibe rar y lo hagas con m igo, e n comú n, acerca
p Ules, vo l. 11I. 2." pa rte, Paris, Les Bell e ~ Leltre s, 1923, pá g. 265, n.j.
.. Se tr a ta, segu ra men le, de la pe rsona de q ue ha bla 1F.No f ONTI'..(He·
de tu hu ésped Menón , que est á aquí. Hace rato que él me
léni cas 111 5, 2) Y qu e fue di rigen t e del pa rti do anüespertanc en r eb as o dice , Anilo, que anhela ese sa ber y esa vir t ud gra cias a los
Plat ón lu me nciona I8m bién en República 33ba. cu ales los hombres gobiernan bien s us cas as y el E stado,
.1 P ro ba blem en te, no se refiere al tirano d e Samos - q ue vivió en se ocupan de s us progenitores y conocen la manera de aco-
el sig lu V l - , sinu a un re tó ricu at enie nse, co ntempo rá neo de Sóc rates,
ge r y a parta r a ciudadanos y e xt ra nje r os, tal como es pro-
par tida ri o de la dem ocracia, a ut or de un El ogio de Trasibulo y u na Acu ·
sación de Sócrates y que pudrla haber ayudado económica mente a la ca usa pio de un hombre de bi en. En rel ación, pues, con esta vir- b
de Ismenias (d . n. bb). tud , co ns ide ra tú a quiénes habríamos de e ncomenda rlo,
6 1. - 21
322 DI ALOGOS M EN Ó N

pa ra que lo hici é r a mos bien . ¿ O es ev iden te . segun lo 1I hu de vuelto en peor e s ta do que c uand o los había r ec ibi -
a ca ba mo s de deci r, q ue a aq uellos que pro meten se r 11111
t ro s de virt ud y que se de cl a ran abiertos a cualqui era
los gri ego s que qu ie ra a p re nde r. hab iendo fija do y pC1 11
l' do , y 10 ha hecho por m ás de c uaren ta a ños - ya q ue c reo,
l ' lI efecto , q ue murió ce rc a d e los se te nt a , de spué s de ha-
hcr co nsag r a do c uarenta al ej e rci ci o de su arte .9_ , y en
hiendo una re m u nera ció n por e llo ? lodo ese tiem po y ha st a e l dí a de hoy no ha cesado de go-
ÁN. - ¿ Y quiénes so n ésos, Só c rates? 11I1" de r enombre, Y no só lo Prot á go r a s. sino m uc htsimos
Soc . - Lo s a be s bien t ú m ismo q ue m e es toy re ñr ten má s, a lgunos a nteriore s :NI a é l y o tros to da vía e n vida " . 920
do a los q ue la ge nte llama su fis ta s .... l Dire mos , e nto nces, sobre la base de tu s pala bra s , q ue
e AN. - ¡Por He recle s. cálla te. Sóc rates! Que ninguno d ellos conscien temente e nga ñan y arruina n a lo s jó ven e s,
los m íos, ni mis amigos más cercanos, ni mis conocido" e> que ni ellos mi sm os se dan cue nt a ? ¿Te nd re mos que con-
conci udada nos o extranjeros, caiga e n la loc u r a de ir t rn s íde r a r los tan locos precisa me nte a és tos de los q ue a lg u-
ellos y hace rs e a rru inar, porq ue evidente me nte so n la rut nos a fir man qu e so n los hom bre s m á s sa bios?
na y la perdici ó n de q u iene s los r rec uenta n. AN. _ ¡Locos... ! No so n ellos los q ue lo está n, S óc ra-
Soc . -¿ Qué d ices Anit o ? ¿So n ell os , acaso, los ú nicos les. Sí, en cam bio, y mucho m á s los jóvenes que les pa-
de cuantos pret e nd iendo saber cómo pr o d ucir algún be. gan . Y t od avía más q ue és tos, los q ue se lo pe rmiten, sus b
nefici o, d ifie r en de m an era tal de los demás que , no só lu Familiares, pe ro por e ncim a de to d os , loc a s so n [a s ciuda-
no so n út iles, como los o t ros , c ua nd o uno se les e nt rega , des. que le s pe r m it en la ent r a da y no los echan, ya sea quc
d s ino q ue incl uso ta mbién pe r vie r te n ? ¿ Y por semeja nt e se trate de un e xt ranjero q ue se proponga ha ce r a lgo de
servicio se a t re ve n man ifiesta mente a pedir d ine ro? Yo, es to. ya de u n ciudadano.
por c ie rt o, no im ag ino cómo podré creerte. Sé, por eje m- Soc. - Pe ro Ani t o. ¿te ha hec ho daño a lguno de los so-
plo, que un solo ho m b re , Pr ot á gora s. ha ganado m á s di- fista s O q ué o t ro m otivo t e lle va a ser tan du ro con e llos ?
ne ro con este s aber que Fidias - ta n fa moso por la s ad- AN. - [Po r Zeu s!, yo nu nca he frecuenta do jamás a
m ira b le s o bras que hacl a - y otros diez escu ltores junto s. nin gu no de ellos, ni dejaría q ue lo h icie se a lguno de los
¡Qué ex t raño lo q ue d ice s! Si Jos que r e paran za pa tos vie- m ío s.
jos y los que rem iendan mantos devo lvieran en peor es ta- SÓc. _ ¿ Pero enton ces no tiene s po r comp leto expe-
do del que los recib ieron ta nto lo s za patos como los m an- ri encia de es tas pe r so na s?
tos, no pa sarían inadvertidos más de trei nta días, sino que, AN. - ¡Y q ue no la ten ga !
e si h ic ie se n eso, bie n p ronto se moriría n de ham b re. Pe ro Sóc . - [Pero homb re bendito!, ¿cómo va s a sa be r s i en e
he a q ul que Pr o tá go ra s , en cambio, s in quc toda la Grecia este a su nto hay a lgo bue no o m a lo, s i e res co m ple ta men-
lo a d virtiera. ha arru ina do a q uienes lo frecuenta ban y los te in experto ?
AN. _ Muy fác il: con experie ncia o sin ell a , sé perfec-
.. Para el térm ino . so fisla _, d . la n. 8 d e la p á g _ 509 del vo l. I de tamente bien quié nes son és os ,
e stos DitUogo s. Una p resentación actu ali zada d e la vieja so fis t ica g riega
,"s la de W . K. e. GUTllk lE, A. HislOry o( Cr u lc Ph ilosoph y, vol. 111. Cam. .. Se eSlima q ue Pro tá go ra s vivió c:ntre 4911490 Y 4211420 a. C. (Cr .
b r idge , 1% '1, págs. 27·54 . Qu ien busqu e u n enfo qu e di fe re n te de l plató- A. H is tor)'..., pég. 262 .)
G U TlIM I E,
ni co , haré b ien en rec u rri r a l a ún ho y válid o c ap. 57 de la o bra de G. GRO' l U ef. P ro/ágo ras 316d-c:.
TI'., History 01Greece, 8 vcls .. Lurujres. 1846-55 (hay nume ro sas ree d tclonesj. l o P rob" bJ.;"mente, Hip i" ., Pródil"O )' (; u rlli"" . (el. AIW I<l¡:ÚI l'h'.)
324 I>1ÁLOGOS MEN ÓN 325

SOCo- Ta l vez e res un ad ivino. Anito. porqu e me U~l llll /.I. la cs. pre ci samente, la cuest ió n qu e est a mo s de bat íen -
b ra , de ac uerdo con lo que t ú mismo has dicho, cómo 1" 110: no s i ha y ho m b re s bu enos en esta ci uda d, n i s i los ha b
d r las de a lgu na a i ra m a ne r a sa be r a lgo a cerca de eltu hn bido a nte r io rm en te, sino qu e hace rato que es ta mos In-
S in e m ba rgo . no so tros no es tá bam os bu s ca ndo q u ién llaga ndo s i la virtud es e nse ña b le. E inda gando eso, inda-
son los que ec ha rían a perde r a Menón , s i él fu era co n c lln !tumos as im ismo s i los homb re s bue no s, ta n to los a ct ua-
d - y ad mita mos. s i quie res. que no s referimos a 111 k l! co mo los del pa sa do, conocieron de qu é mane ra t rans-
sofls tas-c-, s ino a aq uello s a los que él tendría que di rlgu mit ir ta mb ién a o t ros esa vir tud que a e llos lo s ha d a bue-
se , e n u na ci uda d ta n g ra nde, para lle gar a se r d igno d Il U S, o bien s i se daba e l caso de q ue pa r a el ho m bre no
c o ns ide ra ci ó n e n est a virt ud de la q ue ha st a a ho ra he di c'l! e lla ni tran smi sible ni a dq u irible . Es to es , prec tsame n-
c urr ido. Y tú t ie nes q ue decírno s lo. ha cie ndo a sí un 111 re. lo q ue hace ra lo es tam os bu sca ndo yo y Men ó n.
vor a es te tu a m igo pate r no al indicá r sel os. Dime , según tu prop io punto de vis ta: ¿ no afi r ma r ía s e
AN . - ¿ y tú, po r qué no se lo s has in d ica do ? tille Temísto cles fue u n ho m b re de bien ?
SOC. - Po rq u e ya 10 d ije : yo su po nía que e llos eran IUII AN . - Yo sí, y en a lto grado.
~ m aest ro s de estas co sas . Pero en c uentro, por lo qu e aflr Soc. - ¿ Y t ambién un buen m aest ro - pues s i a lguien
mas, q ue en re a lid ad no he d icho nada. Y, tal vez, esté", In fue de la propia virtud, nadie m ás que él- ?
en lo cierto. De modo, en tonce s, que ahora te toca a ti in- AN . - Pien so que s í, de habe rl o q u e r id o.
d ica r a q ué a ten ienses habrá de di r igirse. Di también un soc. - Pe ro, ¿c r ees q ue no habría que ri do qu e o t r os
nom br e, e l del qu e qu iera s. lue r a n bello s y bue no s, y en particu lar su hijo ? ¿O su po. d
AN . - ¿ Y po r q ué q u ieres o ír el no m bre de un o solo? Hes q ue le tenía e nvid ia y q ue deliberadamente no le t r anso
Cua lq u ie r a de los a te n ie nses bell os y buenos n con qu e m itió esa virt ud q ue a él le hací a bu e no ? ¿No has oí do qu e
se e nc ue n tr e, sin excepción, lo harán un hom bre, mejor I'c míst ocle s hizo educar a su hijo Cleofante c o mo b uen
- s iempre qu e les ha ga ca so- qu e los sofistas. jine te ? Y és te, en e fec to, sa bía mante nerse de pie, e r guí-
Soc. - i: Y ésos ha n llegado a s er bellos y bue no s por do , so b re e l caba llo y desde esa po s ic ión arrojaba jabali -
a za r, s in a prender de nad ie. y so n, s in emba rgo, ca pac es nas y re a lizaba muchas o t ra s y asombrosa s proezas q ue
93a de e nseña r a los de m ás lo q ue e llos no ha n a prendido ? aqu élle había hec ho e nseñ a r, co nvir tiéndolo e n un ex pe rto
AN. - Yo estimo qu e e llo s han a pre ndido de s us p re- e n todo aq ue llo q ue dependía de los bu en os m aes t ros; ¿o
dece so re s, q ue e ra n tambi én pe rso na s be lla s y buena s. ¿O no ha s oído esas cosas de lo s viejos ?
no c re es q ue haya ha bido muc has en es ta ciud ad ? AN. - Las he oído.
S6c. - Lo c re o, Anito , y me parece t a mb ié n q ue ha y Soc. - Lue go, e so no e ra debido a que la na t ura leza e
a quí figuras b ue na s en asuntos po líticos, y q ue las ha ha- de su hijo fue se mala .
bido, a demás, a ntes y en no m eno r ca n t ida d q ue hoy. ¿ Pe. AN. - Tal vez no.
ro ha n sido tamb ién bue nos m aestros de la propia virtud ? Soc . - ¿Y qu é enton ces a cerca de esto? ¿ Has oíd o a l-
gu na ve z, po r parte de a lgún joven o a nci a no, q ue Cleo -
72 Para e l alca nce d e la exp res ión griega, véase n. 52 de la p ág. 552
[ante, el hijo de Temís tocles , haya log r ado se r un ho m br e
del vo l. 1 de esto s Diá lo llOS. Por o tr a parte, en lo q ue sigue debe rá n too
maree co rno s ln ónimus la s ex pres iones «homb re bueno _ y . hom bre de de b ien y sa bio co mo su padre?
bien _o AN . - No, por cier to.
326 DIALOG OS M ENÓ N 327
Soc . - ¿Tendremos, pues, que suponer que él qulxuh I llriún e n todo , y, es pecia lme nt e e n la luch a , fue ron los
ce r ed uca r a su hijo e n esas cosas , y que, en cambio, I mejores de Atenas - uno lo ha bía confiado a J a nli as y el
aquel sa be r del c ua l él m ismo se halla b a dotad o, no t¡U I ' ul m a Eudo ro , a los qu e se cons ide raba los más er ni nen-
hace rlo mej or a s u hijo que a s us vecinos. si es qu e la Vi l u-s luc hadores de e nto nces- , ¿o no lo recue rdas ?
tu d es e nse ña ble ? AN. - SI, lo he oí do.
AN. - ¡Po r Zeus!, segu ramente que no. Soc . - ¿ No es e vidente que és te no ha b ría hec ho e n-
Soc. - y éste es, e n efec to. un maestro tal de virtu «ñar a s us hijos aquellas cos as c uya enseña nza ex igía u n
94a q ue tú tambié n admit es que fue un o de los mejo res J I lIasto, descuidando, en cam bio, de pro porcion a rles las que d
pasado. Pe ro exami ne mos ot ro : Arís tides " , el hijo ti 110 neces ita ba pagar para hace rlos hom bres de bien, s i ésas
Ltstmaco " , ¿o no a dmites que ha s ido bueno? hu bie ra n s ido ense ña b les? ¿O era, q u izás, Tu cí d ide s un
AN. - Yo s i, s in d uda a lguna . hombre limitado , que no tenia m uc hos a migos ni ent re los
Soc. - Ta m bié n ése educó a su hijo Lislma co en lo que a te nien ses ni e nt re s us alia dos ? Pr oced ía de una fam ilia
est uvo a l a lcance de los maestros, d el mo do más magn ll l luñ uye rue y gozaba de gr an pode r tan to en la ciudad co-
co pos ibl e en t re los atenie nses. pero ¿ te parece que ha [u llI U e nt re los de más gri ego s, de modo que s i se hu b iera
grado ha cer de él un hom b re mej or que cualquie r a Iro' tratado de algo enseñable. ha br-ía encon t rado q uien se en -
b Tu lo has fr ec uen tado y sab es cómo es. Y si q uie re s otro, carga ra de hac er bue no s a sus hijos, ya sea e nt re los c tu- e
Pe r icl es, u n ho mb re ta n espléndidamen te lúcido, ¿sa bell dndanos. ya e ntre los extranje ros, en el caso de que él m is-
acaso que t u vo dos hijos, Páralo y .Ján fipo 1S? mo no hubi ese te nid o tiem po po r sus ocupacio ne s públi-
A N. - S í. cas , Pero lo que sucede, amigo Anit o, es que t al vez la vir-
Soc . - y a a m bos , co mo sa bes tam bién t u , les e nse ñó tud no sea e nse ña ble.
a se r ji ne tes no inferio re s a ning u no de los a tenie nses, y A N. - ¡Ah... Sócrates! Me pa rece que f ácilm ent e habla s
los h izo educ a r tambié n en m úsica, en gim na s ia y en cuan. ma l de los de m ás. Yo te aconseja ría . s i me qu ie res ha cer
t as a r tes hay , de man e ra que ta m po co fue ran infe r io res caso. que te cu idaras: po rq ue , del m ism o modo q ue e n
a ninguno : ¿ no qu e ría e ntonces hacerlos hombres de bien ? cualqu ie r- o t ra c iuda d es fácil hace r ma l o b ien a los hom -
Yo c reo q ue lo que rla, pe ro ta l vez eso no fue en señable. b res, e n és ta lo es e n mo do m uy pa r ticu la r. Creo qu e ta m-
y pa ra que no s upo ngas que son pocos, y los má s d esd e- b ién t ú lo sabes. (S e va, 0 , hacién dose a un lado, deja de 95a
ñables de lo s at e nie nses lo s que son inca paces de logra r pa rticipar en la co nve rsación. )
esto, te n e n c ue n ta qu e ta m bién Tu cí d id es lo tu vo dos hi- Soc . _ Me pa rece. Menón, que Ani to se ha ir r il ado ",
e jos: Meles ias y Es téfano, a los que dio una excelente edu. y no me aso mbra, ya que, e n pri mer luga r. c ree que es to y
ac us ando a es tos hom bres y, e n segu nd o luga r, se cons i-
lJ el. Gu rgias 52bb.
1< Es, a dem á s, perso naje d el Laques. el. en el vol. r de estos Diá lo·
gas, la In tr odu cción a l Laq u es, es pecialm en te pág s. 44b·44 8.
7) Cf. Prol dgo ra.! 3 15a. Véa se n. 14 de la pá g. 5 14 del vo l. 1 d e es tos 7T An ito n Oha comprendido lo qu e ha dic ho Sócral es. Los dat o s qul'
Diá logo.!. és te ha traído a colac ión so bre Te mis toc le s, Arí slides. Peri c1es y Tud dl'
lo Se refie re a l h ijo de Me les ta s, nacide hacia el 505 a , e., m iembro d es no los ha sabid o loma r como tal e s, sino c omo ca lum n ia. o ma ledi ·
del grupo an üdemccr áñco y vigoro so riv al de Peric1es. Es. probablemente, ce ncia s. E l prop ósito de Pla tó n es el de refleja r cl tipo d e men la lid ad d e
e l a buelo m at e rn o del h is toriad or del m is mo nom b re (n acid o h acia 4 55). e s la s fig u r¡.s in [luy en te s del mom en to .
328 DI ÁLO GO S MENÓN 329

de ra él ta m b ié n uno de ellos. Pero si lleg ara a sa be r u1ltlu Sóc. - En los elegíacos donde dice:
na vez qu é significa ..hablar mal» ", cesa r ía de tr r tturee
pe ro a hora lo ignora. Mas dime t ú, ¿no ha y entre va sOllu , y iuruo a ellos bebe y come, y con ellos
siéntate, y procu ra agrada rles, que tien.en gran. poder.
homb res bellos y buenos ?
Porque de los buenos, cosas bue nas aprenderás; ma s si
MEN. - Por s upues to. [con los malos
b Soc. - ¿ Y en to nce s ? ¿Están di spuestos a ofrece rse <.: ( 1
/1.' mezclas, tamb íen tu juicio has de pe rder ?', e
mo maest ro s a los jóvenes y a aceptar que son maestre e
o - lo que es lo mi s mo- q ue la vir tud es e nseñable?
MEN. - No, ¡por Zeus l, Sócra tes. que un a s veces 1('. ¿Sa be s que en ellos se ha b la de la vi r t ud como s i fuese
oy es decir que es ense ña ble y otras que no. ens eñ a b le?
Soc. - ¿ He mos de a firmar. entonces, que son maestro. MEN. - Lo pa rece, efect ivamente .
de se meja nte d isc iplina, éstos. que ni siquiera se po nen SOC. _ Pero e n otros, ca m b ia ndo un poco su posición,
de acuerdo sobre eso? di ce:
MEN. - Me pa rece que no , Sócrate s. Si se pudi era fo rjar e imp lantar en un. ho mbre el pe n-
Soc . - ¿ y entonces, qué ? Eso s sofistas. que so n les (sam ien to ..,
e ún icos qu e como tale s se presentan, ¿ te parece que so n
y con tinu a m ás o menos así:
maestros de virtud ?
-"
M EN. ::::: He a hi, Sócrates, lo que admiro, sobre todo,
en Gorgias: que ja más se le oye prometer eso; por el con.
cuan. tiosas y múltiples ganan.cias habrían. saca do "

t r.;rio, ser -fe de lo s demás c ua ndo oye esas p romes as. Lo los que fueran capaces de hacer eso, y...
que élc ree es que hay q ue hacer hábiles a las pe rsonas jam ás de u n. buen padre u n m al hi jo sa ld ría,
e n el ha bl ar. obedecie ndo sus sensatos preceptos. Pero ense ña ndo 96a
Soc. - ¿Ta m poco a ti te parece, e ntonces, que los so- nunca harás de un m alvado un hombre de bien " ,
fi s tas son maest ros ?
M EN. - No pod r la decir te , Sócrates. A mí ta mb ién me ¿Te das c uenta de que él m ism o, de nuevo, a p ropósi -
sucede co mo a los de má s: unas veces me parece qu e lo so n, to de la mi sma cuest ión, cae e n cont radicción cons igo
a iras, que no. mis mo ?
d SOco- ¿ y sabe s q ue no sólo a t¡ y a lo s dem á s po lui- ME N. - Pa rece .
cos a vec es parece la virt ud enseñable y a veces no, sino soc. _ ¿ Pod r ías menci onarme a lgún otro asun to en
que ta m bié n el po e ta Teogms d ice estas mismas cosas? que , po r u n lado , qu ie nes d ecl a re n ser su s maes t ro s, no
¿ Lo sabes ? sólo no son reconoc ido s como tales por los demás, sino b
M EN . - ¿ En c uáles versos? que se piensa que na da conocen de él y qu e so n Inept os

,~ Venos 33·36 (D'III<1.).


7. La ~"pres ión grk¡¡a lo mismo puede s ign ifica r «o fende r» . . infa· ' " Verso 4 35 (DIElIl).
mar», . den igra r . (así la en tien de An ito), q ue «habla r incor rect am en te de . ' 1 V er so 4 34 (D JEHL).
[a al la e n tiende Sócn.te s), eL n. 55 del Eutide m o. Il Ve rso s 436-8 (DII!H L).
330 tllÁlOG OS MENÓN 33 1

pr e cisa m e nte e n aque llo de lo q ue afi r m a n se r m a es tro ». ga mejo res. Digo esto ten iend o la vist a pues ta en la inda-
m ie ntra s q ue, por o tro la do. los q ue son reco noc idos cu- gaci ó n rec ie nte, ya q ue es r idícu lo có m o no a dvert imos e
ma hombres bellos y bue nos unas veces afir m a n q ue c\ que no es sólo con la gu ia del conocim ie nto co n lo q ue los
e nseñable. otras qu e no; e n s um a, los que a nda n con fu n- ho m b res real iza n sus acciones co r r ec ta me nte y bie n; y és-
d idos a ce rca de cua lq uier cosa, po drías a firm a r q ue so n la es, s in dud a, la vía por la qu e se nos ha escapado el sa-
maestros e n el s ign ificado pro pio de la pa la b ra ? ber de q ué m a nera se fo rm an los homb res de bi e n.
M EN. - [ Po r Zeu s!, no. M EN. - ¿Qué q u ie res decir, Sóc ra tes ?
Soc. - Pe ro s i ni los so fis tas ni los ho m bres be llos }' Soc. _ Esto: ha bíamos a dmitido correc ta mente q ue los
bue no s so n m aes t ros del asun to, ¿ no es evid e nte q ue ta m o ho mb res de b ie n deben se r út iles y que no podría se r de
poco pod rá ha be r o t ros ? o tra m anera, ¿ no es así? 97a
e M EN. - M e pa r ece q ue no. M EN. - Sí.
S(Jc. - ¿ Pe ro s i no hay maestros , ta mpoc o hay SOC o- Pe ro , que no sea pos ib le guia r c o r rec tame nte,
di scí pu los ? si no se es sa bio. esto parece q ue no hemos acertado al
MEN. - Me parece qu e es como dices. a d m it irl o.
Soc. - y hemos convenido. ciertamente, que aque llo MEN. - ¿ Cóm o dices ?
de lo que no hay maestros ni discípulos no es enseñable? S OC. - Te explicaré. Si alg u ien sabe el camino que con-
M EN . - Lo hemos co nvenido. d uce a Lari sa o a cualquier o tro lugar que tú quieras y
Soc. - ¿ y de la vir tud no parece, pues, q ue haya maes- lo re co r r e guiando a o t ros, ¿no los guiará co rrec ta me nte
tr os po r ni nguna pa r te? y bien ?
MEN. - Así es. MION . - Po r supuesto.
Soc. - ¿ Pe ro s i no ha y maes tr os , ta m poco hay Soc. _ y si a lgu ien o pinase co rre c ta m ent e a ce rca de b
discí pu los? cuál es el ca m ino , no ha bié ndolo r ec o r r ido ni co noc ié n-
MEN. - As í pa rece. do lo, ¿ no guia ría tam bién és te cor recta mente?
Soc. - ¿ Por lo ta nto , la vir t ud no seria enseñab le ? M EN. - Po r s up uesto.
d MIO N. - No pa re ce q ue lo sea, s i es que he mos inv es t i- soc. _ Pe ro m ien t ras tenga una o p in ión verdadera
ga do cor rec ta men te. De modo q ue me asombro, Sócrates, ace rca de la s cosas de la s q ue el otro po see co nocimien to ,
ta nto de q ue pue dan no e xist ir ho mb res de b ien, co mo del ¿ no se rá u n g uia peor, opína ndo so b re la ve rdad y no c o-
modo e n q ue se p ue dan ha be r fo r m ad o lo s que ex is ten. noc ié ndo la, qu e é l q ue la conoce?

~
Scc. - Te mo , Men ó n, q ue tú y yo seamos una s po b res MEN. - No, ci e r ta m ente.
,ri a t ur~s, y q.ue no le h a ~a educ a~o sa tisfac tor iamen te a S óc. - Por lo ta nto , la: o p in ión ve r dadera, en relaci ó n
. n Gor g ías. ni a mi Pr ódico fl. As] qu e más q ue de c ual- con la rec t it ud de l obra~~ será peo r gu ía qu e el dt sce r -
uie r o t ra cosa, te nem os q ue oc upa rn os de noso t r os m is- n imi ento;} es esto, pr eci s amente, lo q ue a ntes o m itíamos e
m os y bu sca r a a q ue l q ue , de un a m a ne ra u o tra, nos ha - al Invesrlga r acerca de có m o era la virtud , cua ndo alír-
mábamos q ue sola m en te e l di sc e rnimiento gu ia ba co r r ec-
tament e el o bra r. En efec to , t ambié n pue de ha ce rl o un a
' J Véa n sc n. 36 al I::uzide mr; ten eS lt vo lumc n) y n. 58 a l PrOl dgu f(l s
(e n vo l. J, p ág. 556 ) de es tos D id l ogus.
o pinión q ue es ve rdadera.
332 DIALOGOS MENÓN 333

MEN. - Pa rece . vas be llas y r ea liza n t odo e l bien po sibl e; pe ro no q uiere n 98a
Soc . - En co ns ec ue nci a, no e s menos ú til la recta 111" Iwrma ncc e r m uc ho tiempo y escapan del a lma de l hom-
m ón q ue la cie ncia. hre, de m ane ra que no valen mucho ha st il.9ue uno no las
MEN. - Exce pto q ue, Sóc rates, el que ti en e el co no, ¡ suj e ta con u na discrim inació n deJa:~us.l1'. y ~st~ es ,
m ien to acert ará s ie m pre. mi en t ra s qu e q u ie n t ien e rcc r um igo Me nón, la re m inis ce nci a , como convIlllmo.s
opin ión a lgunas veces lo log r a rá . o t r as, no . «n t es ". Una vez q ue está n sujetas, se convie rte n, en p rI-
Soc. - ¿Có mo dices ? El qu e tie ne un a r ec ia opin ión. mer lu ga r, e n fragmentos de conocim ien to s y, e n segu~
¿ no te nd r ía qu e ace r ta r s ie mpre, po r lo menos m ien tr u do luga r , se h a cen estables. Pa re sa, pr ec isamente, el ca-
o pine rectament e ? ncc tm ten to es de m a yor valo r q ue la r ecta o p in ión y, a de-
MEN. - Me pa rec e nece sa ri o. De mo do qu e me asom
d bro. Sócrates. siendo a sí la cosa, de por qu é el cono
.
más d ifie re a q ué l de é sta por su víncu lo.
MEN . _ ¡Por Ze us , Sócrate s, que a lgo de eso parece.
,
cim ien to ha de se r mucho m ás pr eciado que la rectae pi. Soc . _ Pero yo también, sin emba rgo , no ha blo sa bien- b
nió n y con re specto a qué difi e re e l uno de la ot ra. do, sino co nje tu ra ndo "'. Qu e son c os as di s tint as la r ecta
Soc. - ¿Sabe s con respec to a q u é te asombras. o te Jo o pinión y el co noci mi en to, no me parece que lo di ga cter-
digo yo ? tamen te sólo por conj et u r a, pero s i alguna o t ra cosa pue-
M EN. - Dímelo. por favor. do afi r m a r que sé -y pocas se r ía n las que afirme- , és ta
Soc . - Porque no has pr est ado at ención a las est atuas tOS p re cisame nte un a de las que pondría entre e llas .
de Déda lo " ; ta l vez no la s h ay e nt re vosot r os. MEN. - Y d ices bien, Sócrate s.
MEN . - ¿ Po r qué m otivo d ices eso ? Soc. _ ¿ y en tonces ? ¿ No decimos t a m bi én co rrec t a-
SÓe. - Po rque tam bi én e llas, s i no e s t án s ujetas, hu- me n te esto: qu e la opinión verdade ra, gu ia ndo cada ac-
ye n y a ndan vagabundeando, m ientras qu e si lo están, ción , p rodu ce un resultado no m e no s bue no q ue e l
permanecen . co noc im ie nto?
e MEN. - ¿Y ento nces, q ué ? MEN. _ También e n e sto ~e pa rec e q ue di ce s ve rdad .
Soc. - Po see r u na de sus o bras qu e no est é s uje ta no Soc. _ Por lo ta nt o, la r ecta opinión no es peor q ue e l e
es c os a dig na de gran va lor; es co mo po seer un esc lav o co noc im iento , ni s~rá men~s. ~t i l para e l o bra r, ni tam ~ J
vaga bundo que no s e queda q u ie to . Sujeta, e n ca m bio , es co e l ho mbre q ue l le ne o pm lOn verdade ra q ue e l q ue t ie-
de m uch o va lor. Son, e n ef ect o, bellas o br as. Pe ro, ¿ po r ne c o noci m ie nto. -" -
q ué mo t ivo d igo est as cusas? A propósito , es c ie r to, de las MEN. - As í es.
o pi niones ve r dade ras, Porque, e n ef ec to, ta mbié n las o pi-
n iones ve r da de ra s, m ient r as pe rmanec en q ui e ta s, so n co-
.~ ¡Jllfas /ogin"o( es decir, más t& n ica men le, esec u encle c ausal »,
.. Se decía que la s es ta tuas d e Do'da lo. co n lo s ojos abie~tos. lo s bra- _razo na mien to fun dado en la ca usalidad . o _cons ide ració n del Fundamen-
zos ex te nd ido s y la s piernas sepa ra da s, e n a ctit u d de ca min a~. p rod uc ía n to . (Rulz ll~: EL ~ I ]l.". Plat ón. Mw ó ,,).
la impre st ón vita l del movimiento y de la vis ión , (e l. DIOoo I<O , IV 76, Y •• CI. ases-ar.
el escol iasta de e ste pasaje de l M enó n.) A e llas tamb ién se refie re PU.l'ÓN 01 Con e l s ign ificad o d e _nipótes is . (cL n. 59) y no co n e l significa-

en Eu tifrón ( l l b·c y l 5b). en Ión (533a· b) y en H ípias M uyo ~( 2 8 2a) . Y éan - d u más t écnic o que uen c e l térm ino en Rep ':'bl icll (e specia lment e , en 5 111'
se n. (o de la p ág . 255 Y n. 3 de la pág . 404 del vol. I de es to s D iál ogos. y 534a ).
334 DIÁLOGOS MENÓN 335

Soc. - ¿ y ha bíamos ta m bién convenido que el hom- M EN . - Por s upuesto .


bre bueno es útil -? Soc. - ¿ Pe ro habí amos conve nid o e n q ue era una co-
MEN. - Sí. sa buena "' ?
SOCo- Por consigu ien te. no s6 10 por medio del cono- MEN . - Sí.
cimiento puede haber hombres buenos y útiles a los Es. Soc. - ¿ y qu e es ú ti l y bueno lo que guia correcta-
tado s. siempre que lo sean, sino también por medio de la me nte .,?
d recta opini ón; pero ningun o de ellos se da en el hombre MEN . - Por su puesto.
naturalmente. ni el conocimiento n i la opin ión verdadc- Soc . - Y que hay sólo do s cosas que pue de n guiamos 99(1
ra, ¿o te parece que alg una de es tas dos cosas p uede da r. b ie n: la opini ónverdadera y e l conoc im ie n to", y q ue e l
se po r natural eza ? . hombre qu e las pose;-s7cond~-correcta me nte. Pe ro, la s
MEN. - A mi no . cos as qu e por az a r s e producen correctamen te, no d epen-
SOC. - S i no se dan, pues, por naturaleza, ¿ ta m poco den de la d ir ec ción hum a na, mient ras qu e aquellas cosas
los buenos podrán ser tales po r na tu raleza ? con las c ua les el homb re se d iri ge hacia lo rec to son dos:
M EN. - No , por ciert o, la opinión verdadera y el co nocimiento.
Soc. - y pue sto qu e no se dan n aturalmente, inv estí- M¡;:N. - Me parece que es así. /\
ga mos después l ' s i la verdad es enseñable . Soc. - Entonce s, p uesto qu e no es enseñable, ¿,~o po-
MEN. - Sí. demos decir ya más que la virtud se t iene por el conoci-
SOC. - ¿ y no nos parecía e ns eña ble, s i la vir tud era m ie nto?
di scernimiento? MEN. - No pa rece .
M EN. - Sí. Sóc. - De las do s cos as, pues, qu e son buena s y úf i- b
SOC. - ¿ y que , si e ra e ns eña ble , seria di sce r ní- les, una ha s ido excl u ida y el conoci mie nto no pod rá ser
mi e nto 90? guía del -obrar pol üí co. ---
MEN . - Por supuest o. MEN . - Me parece que no.
e Soc. - ¿ Y que, s i habla maest ros, se rí a enseñable, pe. Soc . - Lu ego no es por ningún saber, ni siendo sa bios,
r o, si no los habla, no serta en se ñable .' ? como gobe rnaban los Estad os hom b res tales como Temís-
M E N. - Así. tocles y los otros que hace u n mome nt o decía Anito ; y. por
Soc. - ¿Pero no habíamos convenido e n qu e no hay eso preci s amente, no estaban e n con diciones de hacer a
maestros de ella 9J? los de más como ellos, pu es no eran ta l como eran po r obra
M EN. - Eso es. de l conoc im ie nto.
Soc . - Por lo tanto, ¿ habíamo s convenido e n que no es MEN. - Pa rece Sócrates, que es como tú di ces.
e n señ ~ b le .n i es di sce rni mi e nto .'? Sóc. - Entonc es, s i no es por el conoc imie nto, no qu e-
.. el. 87e!. da s ino la b ue na op inión. Sirvié ndose de ella los hom bre s
lO er. 89b y ss . polí ticos gob ier na n los Es ta dos y no di fieren en nada, co n e
..., e l". 87,,2·3.
01 ef. 89d .c. •• e l. ll7d2 ·4 ,
.1 Cf. 96 b7 .9 . ' 5 el. llllb_c .
il Cl. 96cl Odl . •• el. 96c·\l7c.
336 D IÁLOGOS MENÓN 337

respecto al conoc imiento. de los vates y los adivinos . l'u ,jo bie n. la vir tud no se da rla ni po r naturaleza ni seria
e n efec to. ta mbién e llos di cen , por inspiraci ón , m uc h l"t\ sciia ble:sino qu e resultarla de un don di vin o. sin qu e 100a
verdades, pe ro no sa ben nada de lo que d ice n. .rqucl los q ue la reciban lo sepan. a me nos que. e nt re lo s
M EN. - Pu ed e se r q ue as¡ sea. hombres po líu cos. ha ya uno capaz de hacer po líticos tamo
SOC. - ¿Se rá conveniente, en tonces, Menón , lla ma r dI hte u a los d e más ":Y s i lo hu b iese, de él cas i se podría
vino s a esto s hom bres qu e, sin te ner en tend imie n to, 11 .h-clr que es. e ntre los vivos. como Home ro afi rmó que e ra
va n a bu en té rm ino m uchas y muy grandes obras en 1~1 I'[res ias e nu-e los m ue rt os, al de cir de é l que era e l .. ú ni-
q ue hace n y d icen ? I u ca paz de percibir» en el Hades, mientras ..los demá s

MEN. - Cie rtamen te. 1' 1 un ún icamente so mb ras errantes » "'. Y éste. aqut art-i-

Soc. - Co rrec ta men te lla ma rí amos d ivino s a los que: bu, se ri a precisamente. con respecto a la virtud. como una
aca b amos de m encion ar. va tes, adivinos y poetas todos. 1 calidad entre las sombras.
d y también a lo s políti co s, no menos que d e éso s podría - M E N. - Me parece. Sócrates, que hablas muy bi en . b
mo s decir que son divinos e in sp irados. puesto que "'-''''''' SOC. - De este razonamiento. pues, Menón, parece qu e
das a l háli to del di os y po seídos por él . cómo con sus pn- la virt ud se da por un don divino a quien le lle ga . Pero lo
labras llevan a buen fin muchos y grandes designios , sin \ Ic r tc acerca de ello lo sabremos cuando, antes de bus -
sa be r nada de lo que di cen . rar de qué modo la virtud se da a los hombre s. intente-
M EN. - Por cie r to. mos primer o buscar qué es la virtud en si y por sI. Ahora
SOC. - y ta mbién las muje res. M en ón.Haman divinos I' S tie mpo para mí de irme, y trata t lr de convencer a tu

a los hombres de bien. Y los lac onios. cuando alaban a un hu és ped Ani to acerca de la s cosas de que t e ha s tú mismo
hombre de bien. dicen: ..Hom b re d ivino es éste... persuad ido. para que se calme; porque si log ras persua- e
e M EN. - Y parece. Sócrates. que se exp resan correcta- dir fo, habrás hecho tam bién un se rv icio a los aten ien ses.
mente. Pe ro quizás es te Anito po d ría enoja rse co n tu s
pa labras 97 . ... Es te e s. para Plat on. precisamente el ca so de Sóc rs tes, véa nse la s
Soc. - No me Impor ta. Co n él, Men ón. discutiremos .. bse rvec tones a e s te pasaje de W. J"'EGER , Paid eia. trad. Ols t ., Mh ico,
en otra ocasión. En c ua nto a lo que a hora nos conciern e. 1957. plig, 562.
s i e n lo do nu est ro ra zon amiento hemo s indagado y ha bla. ... Od isea X 49 5.

.., La a dj ud icación d e U IaS li nea s _ y de la s inic iales s igui ent es-


ha s id o d isc u tida po r los es tu dios os. La d isl ribución de la versión lalina
de Arist ipo( s iglo xu d . C.l es la sig u ien te : Sóc . - Pe ro quilá s... pa la bras.
MEN. - No me i mporta . SO<:. _ Con el, Men ón ... etc. (PlalO Latinu s, vol.
1: . M eno . in.lerprel e H en. ri co Árislippo, ed. KO"O~ U TU . Londres, 1940, pág.
44). F¡¡ I1W I.AE " o E ~ (Pla lo, ~oJ. lI. tr ad . inglesa . págs. 273 y 35B), sobre la
bas e d e una correcc ió n en el cód ice pa risi no l B11, s ug iere que . No m e
im purtllo po drla adjudkarse a An ito . q ue volvió a ace rc arse a los ín te r-
lucu to re s. E st a po slción la ha bla sos te n ido ta m bié n, en un principio , P.
MAA s(lI em 'cs 60 [1925), 492), pero luego ace p tó el texto que o fr.,ce Aristipo.
61 _ 22
C RÁ TILO
I NTRODUCCI ÓN

E l Crátilo es, sin du da, entre los d iá logos de Pla tón ,


uno de los que más bi b liografía específica ha suscitado
e n virtud de los múlt ipl es prob lemas que plantea l . De-
jando aparte m u lti tud de pe queños det all es qu e van sur-
gien do a lo la rgo de todo el diálogo , éstos son los puntos
que más discus ió n han p roducido: posición relativa del
d iálogo dentro de la obra platónica, id en tificación de los
pe rsonajes, re lación de sus teorías con la s co rrientes de
pen sam ien to de su é poca y de épocas anteriores, va lora-
ción del largo pasaje de las etimologías; en fin, el ob jeti-
\'0 ú lti mo que Platón se propuso al escribirlo. No pret en-

do - ni es és e el lugar adecuado pa r a ello- exponer con


detalle la s diferentes opin iones sobre todos estos p unto s,
a unque si presentar, de una fo rma resumida, el estado ac-
tua l de la cuestión. Sin embargo, po r razones obvia s ofrez -
co previame nte un resumen del contenido de l diálogo.

1 H . KIRCHN ER, Die verschiedenen Auffassu ngen d es plalonischen


Vialogs «Knuylus», Progr. Brieg, 1891·1901, recoge lodos los trabajos a pa-
rc cid o s hasta e se momen to. Más reci ent em ente, J . DERRO LAV , Platons
S prach philosov h ie im «K ra tylos» und in d en sp átere n S chrííe en, Da rrn -
sl ad l, 1972; la In trod ucción d e L. MJ': RIDJER en Piaron, Oeuvres Completes,
vol. V, 2,· par te: Cra/y le, París, 1950 , y, sobre todo, W, K. C. GUTHRtE, A
llislO ry of Greek Phi losophy, vo l. V, Cambrid ge, 1978. aporta n gra n can -
tida d de bib liog ra fía ge neral sobre est e d iá logo . También nos ha s id o muy
útil el recien te trabajo (in édito) de A. VAL LEJO CAMPOS, La convencional í-
dad de/leng uaje de /us presuuá ricvs al . Crátilo . de Platón, Granada, 1980.
34' DIÁLOGOS C RÁTl LO 343
El Crátilo se es tructura, de spués de una b reve íntro- a) lleva ndo a He rmóge nes, s in que éste 10 adv ie r ta ,
du cci ón, sobre la base de dos conve rsaciones sucesivas de de sde u na vag a po stu ra convcn c ionalis ta a a ira e xt rema ,
Sócrates con Hermóge ne s y Cr átilo. sie ndo la p rimera la in dividua lista. He rm óge nes había hab lad o de pac to , co n-
m á s la r ga. aproxi m ada m e nte dos terc ios de la o bra. venc ton. há bito ..de qu ie nes s uele n pon cr nom bres ». pe -
ro Sócrat es le hace ad mi ti r q ue es exacto el nom b re qu e
..cada u no po ne s. S u inten ción es cl ara : re lacionar es ta
1. Introducción. Herm ógenes/Cr átilo/Sóc rates (383a-385at pos tura co nvencio na lista con la epis temología de Protá-
Se inicia el di á logo con una invit ac ión , por parte de go ra s, que He r móge nes rechaza e n p rincipio;
He r móge nes, a qu e Sócrates participe de la discusió n que b) se ntado el principio. fr e nte a Protágo ras, de qu e
ést e ha es tado sos te n iendo con Crátilo sobre la exactit ud los seres ..so n e n st- - y. po r tan to. la s acciones, e nt re las
de los nombres. Crá til o ce de con de sgana y He rmóge nes s c uales es ta la de nom bra r;
plan tea el punto de partida ; Crátilo sos ti ene que los nom o e) llevándolo a admit ir que ..se puede ha bla r fal sa-
bres son e xac tos por «na tu raleza. (p hysei), por lo que a l- mente», con lo qu e se viene abajo definitivamente la te o-
gunos no corresponden a quienes los llevan, po r ejemplo: ría de qu e todos lo s nombres son exac tos por convención.
el m ismo de He rm ógen es. Es te, po r el contrario, piensa A través de un paralelismo muy estrecho - y muy del
que la exa c ti t ud de és tos no es otra co sa qu e epacto s y gusto de Sócrate s- con la acción de teje r (y ot ras act ivi-
«co nsen so» (syn,héke, homologia). ..ccnvencíón - y .. h ábí- dades a rtesanales). el instrumento, el artesano que lo e m-
to _ [nom os, ithos). pica y el fa br ica nt e que lo construye, se llega a la conclu-
l a base de partida de Hermógenes es, como se ve, mu y sión de que la acción de nombra r tiene un Instrume nto ,
estrecha: no se trat a de la e xac ti t ud del len gu aje en gene- que es el no m b re , u n artesano. que es el d ialé ct ico, y un
ra l, sino d e los nombres y, dentro de éstos. de los propios. fa brica nte, que es cl legisla dor- nom ina dor.
Sócra tes opina que es un asunto m uy serio y que me- Al fin a l de es ta parte del dialogo q ueda c la ro qu e _pue-
jor se r ia po ne rs e e n mano s de los sofis tas (especialmen- de que... no s ea ba na l la im posic ión de no m bre s... con qu e
le. Pród ico) -c-acritud irón ica qu e va a mante ne r bu en a pa r- Crá tilo tie ne razón... el a rtesa no de los nombres no es cua l-
le del d iá logo y que pone de man ifies to la poca seriedad qu ie ra , s ino só lo aq uel q ue se fija en el nombre qu e cada
que el tema del lengu aje. así pla ntea do. ti ene para cesa tie ne por na tu ra leza y es capaz de aplica r s u fo rm a
Sócra tes- oPe ro accede a in dagarlo po r el m ét od o dialéc- ta nto a las le t ras como a las síl a bas- (390d). Es dec ir, ex iste
tico en compañia de He r mógenes. un nomb re en si (fo rma) que pu ed e e ncarnarse e n d ifere n-
tes sila bas y le tras. Sóc ra tes co ns ide ra definitiva mc nte li-
qu idada la teo rí a conv enc iona lis ta po r las consecuenci as
11. Sóc rates/He rmógenes (385a4 28bt Critica de la teor ía ep is te mo lógicas y - en def in it iva- ontológicas que imp li-
convencionalista del lenguaje. ca. Fr ente a ella, opone su e- todav ía te nta tiva- teorí a de
1. EN R USCA DE U NA R AS E SÓLI DA. - Sócra tes pret ende las for ma s que parece ajus tarse me jor al naturali sm o de
de s truir in mediatamente la t eo rt a conve nc íona nsta, pa- Crát ilo.
ra ad he rirse, e n pr incip io, a la ide a naturalis ta de Cráti-
lo. Y es to lo hace por los sigu ien tes medios:
344 DIÁLOGOS CRÁTILO 345

2. AN ÁLISIS ETI MOLÓGICO DE LOS NOMBREs(3 9 t d-42 1c). - vtc¡o, lo be llo y lo feo, lo ú til y p r ovec hoso; lo da ñino y
He rm ógene s ac epta todo ello, pero qui e re saber m á s ex ac- lo ru inoso; e l pla cer, e l do lo r, el a pet ito, el deseo, e l a mor,
tamente «q u é cl a se de e xa c t it ud es és ta-. Sócrates a lude la o pi n ió n, la c r eencia, la decisi ó n, la nec es ida d, e l nom-
irónicam en te de nuevo a los sofistas: habrí a que ir a a pren - b re , la verdad y la fa lsedad, e l se r y la esencia.
de r de e llos . pe ro so n muy c a ros y Pro tágoras ya he mo s Es import a nte ha cer no ta r aqut q ue la ba se c o m ún a
vis to que no s ir ve. ¿A quié n acud ir? Nada m á s ba ra to q ue lodos estos no mbres es la ide a hera cllte a de que e l Uni -
los poe ta s y. es pecialm e nt e , Homero . ve rso e st á en con tin uo movi mi e nto 2. Sócrate s relacio na
Es a s¡ como c om ienza e l a nális is et imológico de nom - IIs1 co n He rá clito (co mo antes relaci o nó e l convenciona-
b re s p rop ios q ue aparecen e n Ho me ro. Tras una pri me ra lismo co n Pr o tá go ra s) la teoria na turalis ta que Crát ilo y
te ntativa , que se aba ndona pronto, de buscar la e xact it ud él, po r el momento, sostiene n.
e n los no mbre s que aplican los d ioses (a sí , J anto, Chalkís,
B arjéa) o los hombres. más prudentes. fre nte a las muje- 3. E N BUSCA DE NO MB RE S PR IMARIOS Y _ S TO ICH EIA _. LA
Tes (así. Asrían act ej, se inicia el e s tudio de: n 'oR1A DE LA Mí MES IS(4 2 1c-42 8 b) . - Hermó gene s qu e , por
a) nom bres propios d e héroes y di oses que revelan su lu ge neral, se lim ita a asen ti r a lo que va diciend o Sócra-
naturaleza o fun ción (Héctor , Orestes , Agamenón, Arreo, tes, hace avanzar la ind agación co n una o bservación q ue
Tá nta lo, leus , Ur ano), aunque ta mbién se alude de pasa - 110 ha ce más que llevar a s us últimas co nsec uenc ias la ló-
da a nombre s que sign ifica n e r ey», «gene r a l» , «m éd icos : gfca del a nális is etimológico emprend id o por Sócrates. T"
b) nombres com unes genéricos: dios, hem e. hombre dos los nombres analizados hasta aquí son secu ndarios,
(y de a q uí se pasa a a lm a y c uer po). Aqu í Sócrate s amplia es decir , se explican por locuciones en la s que inte rvie-
por un m omento la est r ec ha ba se del pu nto de partida, ncn las palabras ion, rheon. do ún, et c., pero ¿y éstos ?, ¿có-
para vo lve r de nuevo a nombres propio s de di ose s; mo se explica n? Sócrate s abandona ya el jue go: no se pue-
c) nomb res propios de d ioses: He st ia , Re a, Crono(con de acudi r a l truco, a dmiti do a ntes , de decir que so n ex-
una p rimera alus ión a la fil osofía de He r ácl ito), Po seid ón, rr a njeros. Ha y q ue ir a los «e le me nt os últ imos» {stoicheia,
Ha de s, Pl utó n, Oem ét er, Hera , Pers éfone. Apolo , Musa s. lo que no se explica por otro), e s decir, a los fo nemas m is-
Let o, Ár tem is , Dt on tso. Afrodita, Pa la s Ate nea, Hefes to , mos. Pero a ntes de ana liza r su rel a ción con la realidad ,
Are s , He r me s , Pan. En e s te punto se abandona defin it iva- s ie nta las s igu ien tes ba se s:
me n te el a ná lisis de los nombre s pr o pi os y se pa sa a no m o al La exac titud e s u na y la m is ma e n lo s no m bre s se-
bre s co m u nes de fe nómeno s na t ur al e s ; e unda rios y en lo s p r ima rios. No es líci to q ue da r se e n
d] nombres comunes de fenómenos na tu rales: so l, lu- aqué llo s, como hacen los so fis tas.
na, mes, a s tros, re lám pa go, fuego, y se pa sa , finalmen te, b) La ex ac t it ud co nsist e en revelar la esencia de los
a los nombres co m une s de nociones intel e ct u al e s y se re s , e s dec ir, el «có mo so n».
morales ;
e) nombres com u nes de nocio nes intelectua les y 1110- J En efe cto , aqu ella s nocio nes qu e tiene n o n ~alor _po sitivo . lelo ·
rales: la in teligenc ia , el juicio , el pens a miento, la p ruden- tien en el s ign ifica do de . jo qu e se mu eve , o bie n lo que sigue.
¡t ia b je~)

cia, ci en ci a , comprensión, sa bid uría, bie n, ju s tici a , va len - aco mpaña o favo rece el movi mien to •. La s q u e tie ne n valor . n ega tivo.
(cen surab les), p or e l con tra rio, s ignilica n . 10 qu e se opo ne o dlttc ulta el
t ía , lo masc u lino , la m ujer, e l a rt e , el arti fici o, virtu d y
movimh-ntc »
346 DIÁLOGOS ('RÁT II O 347

e) Est a la revela n media n t e la imit ación: ... e l nombre La argu menta ción de Sócrates es, esque má t ica me nte,
es la imita ció n de la esenc ia mediante sílabas y Ic t ra u In que sigue:
El lengu aje es un arte imit a t ivo más, con un obje to p l U a) Segú n ha q uedado ya se ntado, la exact itud del nom o
p ie, la esencia de las cosas. Así co mo el pi nto r reali za su hre cons is te e n que éste revele la esenci a de la cosa; es
imitación del colo r con los d ife ren tes pigm entos. asJ . d deci r. el le nguaje es u n a rt e imi tativo .
no m in a d o r» realiza s u imi ta ción de la esencia co n stla bae b) Si es arte, por un lado habrá a r tesa nos buen os y
y let ra s. malos, luego el nombre re velará la esenc ia de las cosas
Sócrates ha se ntad o una ba se racional para la tcortn mejor o peor según la canti da d d e rasgos qu e revele de
naturalist a , pero s a be que co n ella ha semb rado la scml. dic ha cosa .
lla d e s u d es tr u cci ón , y. de sd e e l p r inc ip io, deja ve r su de s- Pero, además, es un re t rato, es decir, a lgo di sti nt o de
co n fia nza fren te a e lla: «pa rec e r id ículo q ue se ha gan mu. la cosa (no una adhere ncia o un du pli ca do de ella, como
nifiest as la s co sas med ia nt e la im itación po r silabas y le- sos t ie ne el nat urali smo de Cr á t ilo), y lo mi smo que u n re-
tras... Jo que yo tengo oí do sob re los no mb res p r-imarios t ra to se puede ap licar a qu ien no le co rrespo nde , as! el
me parece completamente in solen te y ridícu lo s. nom b re p uede aplicarse al obje to qu e no le correspo nde;
Per o, a co ntinuación, expone su idea de la im itación es decir, se pu ede ha blar con falsedad . Por segunda vez
que los elementos realizan. u mejo r d icho. algu nos clcmen. se ha probado como fa lso el céle bre sofis ma de qu e no se
tos [ r , d. t , 1, g. n , q, e, o). Con ello pa rece qu e el diálogo pu ede hablar falsamente.
llega a s u té r m ino; s in em ba rg o, Sócra te s, ve lada me nte, e) Ahora b ie n, el nom b re no solamente puede re pre-
y Hermóge nes, con tod a cla ri dad, inst an a Cr á tilo a que se nta r mal la cosa. De hec ho, a veces represe nta lo con-
exponga su opin ión sob re los resu ltado s alcanzado s ha s- l ra r io, como sucede con la pala br a sk lerát és, que slgn íf í-
ta el momento. Este se declara sa t isfe cho sin ha berse pero ca pa ra los a tenien ses lo m ismo que sk lerotér pa ra los e re-
ca tado de que la te orí a de la m im es is ha pu esto de relie ve t rios, siendo as í que, en un caso, te rmina en s y, en el otro,
las contradi cciones int e rn as del naturalismo que él en r, elementos que s ignifica n, seg ún se e xplica ba arriba ,
sos tie ne. Ilac ione s distintas (r, «mov im ie n to » y s, eagtracl ón »). Y,
además, s ign ifica ndo - d u re za - , con t iene Lque den ota lo
liso, gras iento, viscoso (i. e., lo bla ndo).
111 . Sóc rate s/Crá tilo. Crítica de la teoría natura lista d) Y, s in embargo . no s ente nde mos. Aqu í Crá tilo ad-
(428b440e). mite precipita da men te : e si , pe ro por ' costu m bre' (éthos)_.
¿ Y qué otra cosa es cost u mb re que eco n ven ción e (nóm os)?
1. R EVISI Ó N DE LOS POS TU LADOS ANTERIOR I:.S (428b- Con esto, Sócra te s ha llev ado a Cr át ilo a admi tir qu e. en
435d). - A pa r t ir de aq uí se in icia un diá logo de so rdos def in it iva. la e xac t it ud del nom bre consis te e n la
e n el qu e Sócrates hace un a crit ica radical d e la teo r la de conve nción .
Crá til o, bas á ndose e n el pos tu lad o, a nteriorme nte se nta-
do, de que la nomin ación es un ar te imitativo mien tras 2. ESBOZO DE UN NUEVO ,.U NTO DE PART IDA (435 d.
que Crátilo re pite machacona me nte - ya s in ' a rg u me n- 440e). - Si n em bargo, ésta ya ha qu edado rechazada, y lo
tos - s u teorí a. que a hora pre te nd e Sócrates es bu sca r un a sa lida s upe-
redora de los pla nt eam ientos iniciales de una y ot ra t eo r-ía.
348 Dl ÁUx.;OS CR ÁTI lO 349

Para e llo preg u nta de n uevo a su in te rl ocu to r por In dl' a o t ro. Pero, ¿c uál e s é ste ? Dirigir se a los se re s m is-
funci ón d e lo s nombre s: ela e n señ a n za (o m an ife staci ón) lII U S pa r a -si acaso- conocer, desp ué s, la e xa c tit ud de
de los se res », co ntesta Crá tilo. A c ont in ua ción, Sóc rates !>u s nomb re s , y no al r e vés . Aquí Sócr ates ac ude a un s ue-
int rod uce un a s ut il iden t ific a ción entre conoce r y buscar no que t iene a m en ud o (como, ot r a s vec es , a un m ito): e llo
u descu brir los se r es, por m edio de la c ua l de sví a la co- es que los se r es so n en sí (_el b ien en sí, lo be llo en s i y
r ri e nte de la refutació n cont ra el nominador m is mo, úh t- lo de m és -), po r q ue en ca so c on trari o no ha br ía c o noci-
mo ba lua r te q ue le queda a Crátilo J. Sóc ra te s pos tu la mi en to a l no ex is t ir s uje to n i objeto estab le del m ism o.
que t ie ne q ue habe r un m ed io. di stinto del nombr e. tan to De esta fo rma , e l d iá lo go se ci erra con un recha zo de
pa r a co nocer co mo pa ra buscar los se re s, po rque e s te nos la filosofía de He rá cl ito y una in sin ua ció n ten ta t iva de la
lle va a e nga ño . te o ría pla tónica de la s fo r ma s 4 . Los pe r sonajes se de spi-
En efect o . el nomina dor pudo e ngañarse en su juicio den co n la r ecíproca p ro m esa de seguir inve sti ga nd o el
so b re la re a lida d . Crát ilo o po ne q ue ello no fue a sí, por- te rna, s in que Pl a tó n llegue a d educir la s co nsec uencias
q ue todos lo s no m bre s so n co he re nte s con la ide a de flu- implíci tas en la s premi sa s es tablecida s en los último s pá -
jo u niversal. A e s to , Sócrate s r e sp onde q ue pudo equi vo- rrafos. y el d iá logo q ueda in co ncluso, como ta n tos o t ros.
carse en e l punto de pa r t ida y. luego, ir forzan do a to dos Pe ro la pos ición pl ató n ica e s clar a; el len gu aje e s un ca-
par a q ue se aj u stara n a es ta idea. Pe ro, a de m ás, in icia el mino in seguro y enga ñoso p a r a ac ce der a l conoc im iento
reexa men de una se ri e de no m br e s - a lgunos ya t ra tados, de la realida d.
co m o ep ist émé (cie nci a), y ot ros no- a lo s q ue su b yac e El Crátilo no e s el único di álogo p lató nico que tr a ta
la id ea opues ta de r eposo; o b ien de t érm inos «ne ga t ivos - el proble ma del lengu aje, pero si es e l único q ue trata e l
que se aju stan a la idea e postüvas de flujo (por ej., igno- Icngu aje co mo proble m a. Ahora bi en, lo mi s mo q ue en los
r a ncia. in te m peranci a). o tr os di á logos en que. de a lguna forme . se pla nt ea e l t e-
Co n e sto, se ha lle ga do a una a por ía in so luble de sde ma (es pec ia lme nte. e n Eu tidem o, Teeteto y Sofisla~ e l le n-
los p lan tea mi entos ha s ta aq uí exam inados. Los no m b re s guaje co m o t a l no es el verda dero obje to del de bate , s ino
se e nc uen t ra n e nfre nta dos - e n gue r ra c ivil-, lo que in- u na ex c usa de Pla tó n pa ra se nta r su propia e piste mo lo-
di ca , por o t r a pa r te , q ue e l no m in a dor no es un se r d ivi. gía y - en ú ltimo término- su propia o n to log ía.
no, co mo sug iere Crátilo en un inte nto deses pe ra do. Y, por El Crátilo no e s un e st ud io del le ngu aje en s u e s tr uc-
tanto, no s irve n pa ra pro po rc ionarn os c e rteza sobre la rea- tura y fun ci ona m ien to s. Es un deba te so bre la va lidez
lid ad. E l dile ma implici to e s: o se r enuncia a conocer la de l m is mo pa r a lle ga r al co nocimien to >. Tampoco ha y
rea lidad (s i se a d m ite co n Cr á tilo -y co n He rmó ge nes-
que e l le ng uaje es e l ún ico me d io de cono ce rl a) o s e a c u- • e t. n. l8 al te xlo .
s A. E. Tn w ll, Plato, th e Man a 01d h ís Work , Londres, 1929, a un re-
conoc ie nd o 'l oe el te ma bás ico de l di á lo go es la correcció n de los nom-
J Bfcc ttvame n te , el no min ador no p udo descubrir los seres , pue s to bres, pien sa q ue e s u n e stud io d el uso y fu ncion es de la lengu a , <.:t ., ta mo
qu e lo s nom br es, ú n ico med io de inv es tiga r los y co nocerl os , todavía no bié n, p, hI W 1..AN DEIl, The Diaíogs, f irsl Period, Nueva Yo rk , 1964.
exis tía n. Es te mi sm o a r gumen to lo rec oge n los e p icúreos con el ti n d e • So bre la fin a lid ad, bá s ica me n le ep istemológica, del Crátilo, el. H.
nega r la int er vención de cu a lq u ier clase de ede rníu rgo s en la cr ea ció n S TEINTlIA l , Ge~" h ich te der S p rochwissenscb ait bci den Grie"h en und R/)·
y t ran arniaión de l le ngu aje (d. DlóGENEs U ~ ENOANDA, F r. 11, col. lll; L IJ- mer n; Berlín, 196 1, a sí co mo A. Dlt s,A lA lO ur de Plat on, 11: Les dialogues
CRECIO , V 1028). (p ágs . 482 y s igs.), Pa r ís , 1927.
350 D IÁLOGOS C RÁTI LO 35 1

que bu sca r e n é l, por co ns ig uiente. un a indagac ió n sob r Pues b ien, el prob lema de la orth ótes, lo plantea Pla-
el origen, como se ha hec ho a veces 1. Desde el prlnciptu Ión dentro del ma rco general de la típica a ntino m ia sol ts-
mismo del diá logo, qu eda suficientemen te claro que el ver- ucn ph ysis / nómos '0.
da de ro tem a es la orth átés (e recutu d - o - e xac rit ud s] de! No lo hace, desde lue go, en los t érminos de la opost-
nom b re. cl ón pllysis / th ésis, que es post erior " ; y es, al menos,
y aqu í ha y qu e hacer dos salvedades: en p ri mer luga r. cues tio nable el que se hubie ra p lanteado ex presamen te
no se t rata de la correcta aplicación de los nombres. Es. en los de ph ysis / nóm os a ntes de Platón con la a mp litud
te es el se nt ido de la orth átes de Protágo ra s. Pródico o el t lllC és te le concede, a un q ue testimonios de Dem ócrito y
mi smo Dem óc rit o ' . Con es te término se refiere aq ul Pla- Ant ifo nte pa rezcan dar pie para pe nsarlo 11.
tó n a la adecuación del le nguaje con la realidad , lo que Tanto Crátilo como He rmógenes sost ienen que los
pone de man ifies to. como señala ba a ntes, qu e el proble- nom bres son exactos. La diferenci a estriba en qu e para
ma real no es lin güís ti co, sino epistemológico. Herm ógene s lo son tod os katá nómon o em os (por «con-
En segundo lugar. no se t ra t a, en princ ipio. de la exac - vencí ón» o «cos tum bres ) y para Crátilo, o lo son kat á
ti t ud del le nguaje en general, s ino de la «exact itud de los I,J¡ysin (ajustándose a la realidad), o ni s iquie ra son nom-
nombres » (orthó ti s ono mátón) y. más exactamente , de los bres . s ino meros ruidos. Tal es el pl a nte a mi e nto r ad ica l
propios, lo cual proporciona al d iálogo un punto de pa r- qu e se ofr ece al comie nzo del diálogo por boca de H e rmó-
t ida exc esivamente estrecho. Bien es verdad que Sócra- genes: doblemente radical, ya qu e se afirma que lod os los
te s va ampliando el lema, progres ivam e nte, a los nombres nombre s son exactos y que, o lo so n por convenció n, o lo
comune s, a los verbos y, en definitiva, a los elementos úl- Mm po r naturaleza. Veamos por separado ambas tes is y
ti mos, pero s iempre se queda en el um bral de la pala bra sus ba ses fil osófi ca s, así como las im plicaciones que üe-
in div id ua l '. ncn o las que Pla tón le s a t r ibuye.

a) La teo ría convenciona íista. - Es la sostenida des-


de el pr inci pio por He rm ógene s. En rea lid ad, no se t rata
1 A~l. M. LEl<.v. P/a lo a/s Sprach pl,i/osoph_ Wii rdiglm g des p ía toní- de una teorí a m uy ela bo rada, como demuestra el que Her-
schen «Kral)'/os. , Pade rb o rn. 1919. mógenes emp lee u na te rm ino logí a vaga (em plea syn tll¿·
I Es cla ro , po r e l te st imo n io dd mismo Pla lón. q ue la nt o Pród ico
co rno Protágo ra~ t ra la ro n elrema d e la o rlhoépeUl. É~la, s in e mba rgo ,
ki , homologia, nómos y éthos, como s i fue ra n s inónimos),
tenia pa ra d io s u n ~alor p uramen le p rag mát ico (cf. C . J . Cl.AS SEN, . The u¡ siquier a firmemente su st entada po r este pe rsonaje. qu e
St udy of Lan gu age a rno ngsl Sóc ra tes' Coe tempora rles e, Proc. of Ih e Afr. se deja lle var por Sócra tes dema siado fáci lmente haci a u n
Ctess. Assoc. (19591, y D . FEf/ U NG, . Zwei Un rcrs uch un gen zu r Grk ..-hi- tipo d e conve nc iona lismo que él no habla formul ado. En
sch " n Sp ra ch philosoph ic . , Rneín Mus. [196 51, 2 12·30). De la Orthoepeie.
ef ecto. Sócrates lo llev a a afi rmar que son exac tos los nom-
títu lo d e u na obra de p emoc r nc. sabemos mu y poco. pe ro es pos ible qu e
e sté in serta en la la rga se r ie de lo s comen tarios de glos as ho mé ri ca s (d. b res que cada un o ponga, posición que contradice la no-
W . K. C. Gu ·rHR I~ . A Histo ry of Greek Phiíosoph y. vol. Ill, pÍlgs. 205 y s igs.).
• S in emb argo, el que esto prueb e que el Cr áüío sea un dia logo me- 10 eL w. K . C. G UTllRIF.. A
hislory .... ca p. IV . p ágs. 55· 134 .
nos ma d uro~ , pu r la n to , a n te rio r a l TeelC/O y So íísta, es otro p ro bl ema . I1 A ~l, D. FV.HUNG,. Zwei Unlen uchu ngen ...., 218 ss.: en amb a s leo-
(er.. má s abajo, pág . 351l .) A. V ~llf.J o(La con venc íonalidod..., p á gs. 191 rrus hay un mo niento de thés is (imp osici ó n) del nombr e.v '
~ ¡ igs .) se Inclina po r ello . u Cf. W. K. C. GUTHRIE, A H ísto ry..., págs. 201 ~ slgs.
352 DIÁLO GOS C RÁTIL O 353

c i ón m is ma de «con ven ción - po r razon es obvias I J . Lo on om ácein, et c.) se deduce claramente que lo s nombres
q ue inte nta Sóc r ates, a rras trándo le has ta esa pos ici ó n, es q ue no co rres po nden a la r eali da d so n pu ra convención
ha cerle c reer qu e de r iva dir ec ta me n te de la e pis te molo- e nt re los huma nos , sin por ello negar le s la c a tegor ía de
gía de Prot á goras , q ue Herm óge nes se apres u ra a r ec ha- nombres. Es el mi s mo tipo de convencionalismo rel a ti vo
zar. En re a lida d . es ta vi sión ta n estrecha del co nvencio- q ue aparece, co n fraseología similar, e n filósofos como De-
na lis mo le s ir ve a Sóc ra tes para r ef u tar la t es is de Pro t á- m ócrlto, Anaxágoras y Empédocles 16 , y. e n definitiva, e l
go ras y dej a r se ntado . desd e el pr inci pio m is mo de l di á- q ue refleja Plató n mismo e n la Ca rt a VII 11.
la go, lo qu e van a ser sus dos concl us io nes má s im portan-
te s: q ue la re a lidad no de pende de noso t ros ti. e., el se r es b) Lo. teoría na turalista. - Crát ilo es, fren te a Hermó-
e n s í) y q ue existe la po s ib ilidad de desc r ibirlo Falsam en- genes, un ho mbre de escuel a, pr obab le m ente un «u ró n- ,
te (i. e., de ha bl a r fa lsame nt e). Po r q ue. en ve rd ad. n i Pro- un nov a to , que mantiene cont r a viento y marea u na reo-
tá go r a s parece habe r m anten ido es te tipo de conve ncio- na natu ralist a q ue tiene bi en apr end ida, pe ro poco pe n-
nalismo ni, a unque lo hubiera hec ho . su fil o sofía se r ía la sa da: e l no mbr e es u n d uplicado, una co mo ad herencia de
única base teórica para el m is m o. la cosa. De aquí se de d ucen do s co n sec uenci as e pis te mo-
En e fec to , éste aparece e xpuesto, con m ayor o m enor lógicas de suma graveda d a los ojo s de Sóc r at es: la pr l-
cl arida d, en los múltiples r elatos de la teoría hu m a nist a me ra es q ue no se puede ha b lar fa lsamente. Si el no m b re
del progreso q ue era un tópico en lo s cí rcu los so fis- es no m bre, e l e m pl ear uno inadec uado no es ha bl a r fal o
t ica s 1". Pe ro, incluso, puede q ue no sea un d isparate semente . s ino e m it ir so nidos sin senudo. En segu ndo lu-
el hecho de qu e Diógene s Lae r ci o [Il l 9) re lac ione a Her- gar, el nombre nos proporciona un a infonnació n exacta
m óge nes con e l g r u po e le ático. En efecto, las premis as sobre la realidad; conoce r el nomb r e es co nocer la rea li-
e p iste mológ icas de Pa rménides pu ede n lleva r a un con- da d. A a mbas id eas se opondrá Sócra te s co n todas sus
venci o nalismo re la t ivo . No es q ue Parm énide s fo r m u la ra fuerzas e n la últ im a pa rt e del di á logo .
nunca u na teor ía lingü ís tica -y mucho m enos co nve n- Ya en la e t imo logi a de CrODOS y Re a y, so b re todo,
ci ona lis ta- , pe ro de la frase o logia de los frs. 8 8 y 81 9 IS c ua ndo e xpo ne la idea del no m in a do r al impone r los no mo
t ónoma ka tet hento, ne n ám ísrai. ka tethento d uo gnó mas bres. Sócra te s re la cio na s ut ilmen te con He r áclito e l na -
turali smo. De ot ro lado, Crát ilo m ismo m antie ne s im ulo
u Ta n to S)ln lh#.1 co mo ho nrofogía im p lica n la ex isten cia de un a
réneeme me la filo so fía de Herá clito y la teoría na t u ra lis-
p lur¡¡lid a d de perw n a s q ue llega n a un acu e rdo. Nóm os ta mb ién , e n tan- ta. Sin em bargo, es a l m enos cuestio na bl e qu e de la fi lo-
to q ue co stu mb re soci a l. En ca mbio . érhos p a rece re fe rirse. en p rinc i· so fla de Heráclito se pu eda deducir ta l teorta. Ante s a l con-
p io. a un b áblto ind ivid ua l y. qu izá , po r esta razó n, lo inclu ye Pla tón co n
lo s o tros t res. Ademá s, se rá el an zue lo qu e Crátilo va a morder en 434e
ad miti e ndo de repe n te e in a dvert ida men te el co nven ciona lismo. l. A. VAoLLl!lO, La conven ciotlalida d.... pá gs. 138 y s igs., ofre ce lod o s
l' L. ROIII N. Lu pe nsü heiléniq .. c:, París , 1967, opi na q u e es preci sa· los pa saje s en que es tos f ilósofos _enfrenta n los p ri ncipios on to ló gico s
men te el natura lismo d e Crá t ilo el que se deriva de la filos o ffa de Prot á· de l s istema co n aq ue llo s t érmin o s qu e los co n tra d ice n _o t érm in os qu e
goras s itua ndo a Hermógenes. contra la op inión gene ra l, en el polo op uesto s on. pa ra e llos , nomoi y no physei (o co nl ra thémis). En Demóc rito , claro
de l her a c litismo . ea ti, e l co nven cion a lismo es má s estricto , plle ~ der iva d ireclament e d e
11 Cita mo s s ie mp re a lo s pre so crát icos po r H . OIl'.LS--W. KaAN z. 1Jie su sis tem a (c f., sobre to do . el fr . B 125).
F'ragm ent e der Vorsukru tiker, Ber ltn , 1960-6\. n Cf. 343a SS., y n. al tex to .
61. _ 23
354 D I ~L O GO S CR ÁTILO 355

tra rio, parece que de u na ontología en la que t od o fluye () que ha si do llevado a esta fílosoñ a . preci samente aquí ,
se rí a más lógico de d uci r un a teo rí a convendon alis ta del po r Sóc ra tes 12.
le ngu aje. Es ta contrad icc ión, al menos aparente ", como Aho ra bien, c ualqu iera que s ea la so lución a l .. pro b le-
p licad a por las not ici a s q ue de Crát ilo nos ofrece aris t ó- ma de Crát ilo .., es e vid e nte que la filosoffa de He rácl ito
tefes (Metafísica IOIOa7 ss. j cons t itu ye el lla mado _pro- no es e l único, a unque . qu izá, sí el más im portante, blan-
blcma de Cr áti lo ». Br e ve mente, éstos so n los términos del ca de l a t aque d ia léc tico de Sócra tes. Y -c-sob re IOdo- no
proble ma: e n el Crátilo es te personaje a pa rece mantenie n- es la ún ica base sobre la que se s uste nta el na tu ral ismo .
do s im ult á nea mente a m ba s teo rías; s in embargo, Ar istó- Hay ot ras qu e resultan obvias : de un lado, la c reencia irra-
tele s (loe. cit.) lo p resenta só lo como un heracl iteo radical cio na l en la relación má gica del nombre con la cosa que
que «c ret a qu e no se debía deci r nada, limitánd ose a mo- se da en todas las c u lt uras prim itivas ". De otro la do. lo
ver el de do ". No se d ice nada del na tu rali sm o lingüí stico que Dióge nes La erci o (IX 53, 3.35) llama la .. tes is de An-
y, más bien, pa rece d educirse lo contrario. ¿ Cómo con - n stenes », según la cua l la contrad icción es impo sib le, por-
jugar a m bas vis iones ? A me nos que el Crát ilo del di á- q ue cada cosa tie ne u n lógos oikeíos, lo qu e viene a s ign í-
lago no re sponda al histórico I'J o que, como mantiene ficar que es imposib le hablar falsamente ".
Jackson -, se a un heracliteo para qu ien los nombres son En efecto, desde Schlei e rm ac he r se ha venido manteo
el único medio de fijar el flujo d e las cosas, habrá que ad- nien do que en este diálogo , 10 mismo qu e en el Eutidemo,
mitir: o b ien que Crátilo no es realmente un beracliteo ", Platón está a tacando a Antís tenes s in nombrarlo n.
Fina lmente , la m is ma filosofía de Pa rmé nides, de
.. E . CIlU III:U . F ilo$QfiQ de IQ$ F o ...,QS S imbólicQ.S. México , 1971. no
quien, en últim o términ o, deriva Antlstenes, pue de esta r
ve co n tra d icc ión a quí: -só lo el ,,"OCablo móv il y mul1iforme qu e, po r n i e n la ba se de l natural is mo >. En el fr. B8 n iega el filóso-
dec irlo, de sborda s iempre sus p rop ios limi tes, en cu ent ra contTllpart e (en) fo de Elea la pos ibilidad de un enunciado falso (_no se pue-
la p len itud dellogos confo rmado r del un ive rso . (pá g. 67). E so s i, los Se· de exp resa r ni concebir que no e xis te.., no podría s co no-
gu idores de Her á cl ito des... irtua ron esta co nce ¡>ción or ig ina ria d el mees-
reo. Crlttilo es, pues , u n heracli tco q ue t ra n sfie re »la ide nti da d qu e He·
ce r lo qu e no es - pues no es alcanza ble- n i t am poco pe-
r áclüc ha blll afi rma do e n tre eltodo d cl lenguaje y el to do de la TlIWn ... d rías ex presa rlo»¡ y es evide nt e qu e, tanto Antl st e nes ca-
a la rd ación de la pllla bra tlisladtl c on su co nt e n ido ei dé tico_ (p ág. 70).
,. Pa rll M. W ~lI1I u ItGI .Zwe i Fra gen zurn K raty/os_. N~ue Ph i/o/. Un. e n e l d iá log o, po r oportun ismo , i. e., po r pensa r qu e e sra filosafla a po ya
tusu ch. 5 lBerlin. 1929J), el personaje de enHilo está en cu b rie nd o a lI e· s u les is.
rád ide s Pc nucc, pero es ta te~ i~ no ha te nido gran ac ep tació n y si mu - u Esla tes is «evolucíonis tas de D. J . ALLIlN(_Thc Pro blem 01' e,Qty·
"ho s det ra c to re s. Seg ú n VAN I J lE Il:E N (D~ _Craly/o _ Heraclite o et de Pltlto · lu s». Am u . Jou rn. 01 Philo/. 75 (19541, 27 1·87), y R . M ONDOl PO (La com o
tUS «c ro ry to » (Mn tm os)'ne N. S ., XLlXL 1921), e l Crátilo d el d iá logo se- p r~n sión d~/ S ui~ fo e n la Cultu ra An rigr.a. Buenos Aire s, 196 5): Crál ilo
ría un a c arica tu ra q ue hace Pla t6 n de Su ma es tro pe ro es difícil q u e CrA- se ria lle vado a un he racl ili smo rad ica l a p ernr de este diá log o co n
lilo fuera nu nca mae st re d e Pla tón (d . n. 2 al texto). A Dies (ap"d M¡;l ¡. Sóc rate s.
Il IER. Piaron ... Int rod ucci6n . pá g. 38. n. 2) pie n sa que Crá ti lo escond e un j) Ct , H. G. GA UAMER. Verdtld y Mélo d o. Salaman ca. 1977.
tipo y n O rep rese nt a a un lndi ... iduo real. Esto. si n emb a rgo. no es ha bi· l f So bre la «tests de Antlstene s-, d . W. K. C. GUTHIt IE. A H;slo ry....

tual en los diál o go s plat ónic o s cuya fuerza d ram á tica der i...a de la re ali- págs. 209 y sigs .
dad de SUs pe rsonaje s. co n tem po rán eo s d e Platón. 11 En eEinleitun g zur Übe rse rzun g d es K rtllylo s •. en Plalon .l We rke.
2IJ cl'. H. J AC KSU N, Camb rid¡:e Pruelections, Ca mbridge. 1906. Berlln, 1855. Sob re 10 $ segu idores de este a utor. d . M ~.IIl D IEIt . Pla/ cm....
11 AsJ. G. S . KIMK (eT he ProbJem uf Cratylus », Amer. Jou n!. of Ph i· págs. 44 y s igs.
101. 72 [195I J. 225·53). qui en sos tie ne qu e Crá tilo e s he ra cl iteo so lo aq ul. l. AsI o pin a G. S. KIlI( . • The p ro blem ..... 230.
356 DIÁLOGO S CRÁT ILO J57

mo qu ie ne s c o n el sostie ne n el p rincipio d e la im pos ibi ll. te nsió n, algu nos c omen taristas ha n visto en e lla e l o bjet i-
d ad d e la p re dicació n fa lsa , no hacen más q ue llevar a s u. \ '0 ú ltimo d el d iá logo Jt> y elo gia n la ge n ia lid a d d e alg u nas

ú lt imas co ns ec ue ncias lógicas la s pre mi sas de Par- idea s. En ge nera l. se basan en la e mo d e rrud ad » d e algu-
m én ide s. nas id eas ling üfs ttcas que aparece n (evo lución fon ética.
Ést as son las dos teo rías so bre la e xactitud de los nomo prés ta mos lingüísticos, etc.). Si n emba rgo, la m ayoría son
b r cs ta l co mo apare cen ror m ulada s en e l Crát ilo, así co- hec hos demasi ado obvios, y, so bre todo, Platón lo s ofrece
rno la s di ferente s b a ses teó r ic a s sobr e la s que podrlan com o t r u cos p a r a m ani p u lar etimo lógicament e el mate-
s ustenta rs e. rial q u e S ócrates e lige para s u aná lisis . E n re alidad , lin -
gü ís t icamen te hab la n d o , esta sección n o tie ne va lo r a lgu-
e) La posición de S ócrates. - El pretender deduc ir de no . La ma yo r ía d e la s e t im o logfas son d ispa r ata d a s,
q u é la do e s tá Sócrate s e n esta o po s ic ión conve nciona lis- como He r mó gen e s y e l mi smo Só c rates se enca rg a n d e de-
mo/n a tu r a li s mo , co mo se ha h ec ho, e s senc ill ament e d e- c irn o s más o me no s claramente. Solamen te u n p u ñ a do son
sen foc a r e l problem a 11. És te es u n o de lo s di ál o go s de co r re ct a s y, aun éstas, son simples aproxi m acion es d e
P la t ón más finos de sd e el punto de vis ta de la di al écti ca unas p a la b ra s con o tras de su mi sma r aí z .
socrá tica, y si algo re sulta evide nte, es que Sócrate s se opo- Deb ido a l cl ima d e ir o n ía q u e e nvuelve toda est a sec-
n e, p rimero, a una teo rí a y, lu ego , a la otra con el único c ión, es p ro b a b le q ue Só cr ate s es té r id iculizan d o lo s pro-
fin d e desvelar sus co ntradicciones y pe lig ro s; para re c ha - ced im ie n tos e timo ló g ico s d e lo s so fis tas en ge ne r a l,
za r a la s dos, en últ imo té rmino .1. a u n q ue é l a lude más co n cr e ta mente a Pr ó di co y P ro -
Una ve z q ue h a rech a za do e l c o nvenci on a li smo de He r- tá go r a s J I . S in e mbargo, e sta iro n ía no se agota en sí
mógene s, por el peligro de s us im plic a cione s e pi s te mo ló- m is ma n i la fin alidad del Crátilo es d ive r t irn os .12: el m é-
gicas y por se r cont rario a la a d m is ión, por pa rt e de Her- to d o e timo ló gico , lle va d o a su s ú lt im a s co nse c uencias ló-
m ó ge ne s , de q u e lo s sere s so n e n si y q ue se pued e ha b la r g icas, desemboca, en de fi n iti va , e n u na teoría m imética
Fal same nte , Sóc rate s pa re ce to m a r p a r tido po r el natu ra - d el le n guaje y és ta , aunq u e a l fina l se re vele in s u ficiente,
li smo . Pero , e n re a lida d , toda su argumen tación a ra yar es una orig inal a port ación socr ánco-plat óníce a la teoría
d e esta tesis se va a " 0 1ve r en c on t r a a l fin al del di á log o . lingüística . En efecto , según ésta, el lenguaje tiene la m is-
Comie nza Sóc r ate s analizando e timo lóg ica m en te e l s igo m a fu n c ió n -y funcionamien to- que la s demás a r tes irni-
ni ñ eado d e cierto s nom b re s p r opios - y lu eg o comune s- tativa s, aunqu e su objeto últim o sea muc ho m á s s er io: la
en u n clim a gene ral de Ironía >. To d a e sta extens a sec- e se nci a d e la s cosas. Ahora bi en , s i la teoria naturalis ta
ci ó n e ti mológica, que oc upa má s d e la mitad de l d iá logo, nos ha lle vado a la mimesis, a hora ésta se vuelve co n t ra
h a sido objeto d e varias in te r pre ta cio n e s. Deb ido a s u ex -
1<1 Asl, G . GRO TE., Plato and o /her Compa .. i<m s 01 SQC~a/n, Lond relO .
J1 e l. R. R ODl l'lliO N, . A C ri l ici"n 0 1 Plat o 'lO ero /y/uso, Phll. Revue 65 1865; D. RoslO, . The da te of Plato'lO Crll/) fus _. Rev. l me r... Phi/os. 9 (19 55).
(1956). 324·34 1. 187·96, Y J . DI!R IKlLAV, P/ ,JlO/l'$ Sp ~achr h ilosoph ie .." a nt . cu.
11 A . P ie s (apud. M ~. R lI>l hR , Pluw ...... pág. 30) se re fie re muy ac e r ta- J I No tenem os, sin em ba rgo. mh dato s qu e esta ca rica tura so bre lu s
dame n te a este d iálog~ como una op eución d e . dé b la ieme nt. d e las leo· procedimie nto s e timo lógico s d e es tos d os s ofis tas.
rlas lingü ls ti ca s d e su époc a. JI U. '0'01'1 WlLAMOW\Tl lla ma al Crátilo - e m lu stig es Buch » en Ptaton.
•y CL n . 46 a l texto. Se,,, Leben und seine Wer ke. Ber lín, 1959.
358 DIÁLO GOS CRÁTILO 350

aqué lla - lo que pone de ma nifiesto. e n grado s umo, el 111 t\m im J ) , s igu ie ndo la m isma lín e a esradts fica, a unq ue
ca nee de la ironía soc rá tica . a poyá n d ose m a s p r udentemente P O el u so de fó r m u las de
Crá tilo. qu e ha ace pta do el aná lis is etimo lógico y la le replica a fir m a tiva tna í. pán y gé, p ány men aun), 10 clasif i-
r ía de la mim esis, ba sada e n la filosofía de Heráclito. - n i ta mb ié n, jun to co n Me nón, G org ías y E ut id e m o , e n e l

ve rá fo rzado a ad miti r que todo ello es con trad ictorio con primer gru po. Es ta mi sm a opin ión m an t ie ne n D. Ros s Jo
s u propia teo rla de l le ng ua je. En este mo me nt o, Sóc ra tes y, más rec ient e me nte , J . V. luce J7, y , a u nq ue sacar co n-
parece, de nu e vo, to mar pa rtido por e! convenciona lismo clu s tones de l conte nido de los diá logos se ha reve la do pe-
Si n emba rgo , el d iá logo no es una ba ga tela d ia léc tica. ni lig ro so des de Sch le iermache r, la in ma d u re z de la teo rí a
ha y q ue busca r - re pito- de q ué lado se q ue da Sóc rat es. Ik la s fo r m as. ta l co mo a q uí se ex pon e, o de la concep-
so pesando c u ida dosame nte tod a s la s afir maciones que ha rión ge ne ra l del leng uaje co n res pec to a l Tu telo y Soiis-
ce a lo largo d el m is mo. Al final. lo que queda b ien cl a ro / 11. parecen a po ya r e sta a t ri buc ió n de l Crátilo a l p r im e r

es la inte nci ón de Sóc rates de descalificar a l le nguaje co- gru po.


mo m edi o pa r a acceder a la realid a d. m ediante el rec ba-
zo de do s teo r ía s q ue pr etendían. ca da una, co nstitu ir a
és te en e l único y m ás idó neo m é todo par a e llo . NOTA SOBRE EL TEXTO

J::ngen eral. sq;uimos el luto de la edición de J . B~ . " H fP1t2 lCm u Opt ~a.
Fin a lmente , una s pa la b r as sob r e la posic ión rel ativa
l h lo rd . 196 1). que s igue s iendo u na e d ició n e J<celen le , sa lvo. quizá . en
del Crátilo dentro de lo s diá log os de Plat ón . Es un o de los 1.. q ue se refie re a la s conjeturas d el propio Bu m e! y a s u exc es rvc apl:llo
poc os d iá logos so b re los q ue e l a cue rdo no es uná nime , a In lec tu ra s (espec ial me n te las omis io nes) del M5 . T. T a mbi~n no s h a
n i siq uiera e n lo q ue se refie r e a su as ignac ió n a u no de, ~i do m u y u ril la ed ición de L M". lOIU. Piel /un. Quv .n CQmpt~ les. vol.
los t res g r u pos c ronológicos es ta ble c idos por e l m é todo V, 2." pa r le: C~el ly/e, Pa rb . 1950.
esulom ét r tco. El Cr átilo no ti e ne a lu s ione s direc ta s ni in- 1\ 0 5 a pa r ta mo s de l tex to de Bu met e n los s igu ie ntes pa....jes:

d irectas a he c hos h is tóricos que pud ie ra n fija r s u te rm í-


38436-37, sin corchetes.
nus post quem , y ha s ido s it ua do po r d ife r e ntes fil ólogos 384d5, sin corchetes; [oú btv . . . 1[po"tlpool (sed. BUTER) .
en ca da u no de los tr es mencio na do s gr u pos. Sin e m ba r- 385cIO. 'lO 6 vO(la (Mt R1DIEK).
go, pese a los inte ntos de M. Wa rb u rg, G. S. Kirk y D. J . 38Set5, ~i C'; ( W.) .
Alla n II de r e le ga rlo, po r d ife rentes r a zones , a u na fec ha JaSet , b:á(J 'ta lC';. [ t vl o t C'; l (T .) .
ta rdí a - o de la ac t it ud me no s comprom e t ida de J . De r - J8óa2, b5. el. d8. 387a4, d4, sin co rchetes.
bola v y L. E. Ro se lo' q ue lo s it úa n e n el período inte r - 38!lc6, 6vó ¡.tQn ( KaN7iC'; ), Ka ).,w<; (Co ISUN; M ~IDI l'.R) .
m ed io- , s igue ten ie nd o m a yor acep ta ción la o pinión de 389a l, c5, sin co rchetes.
C. Ritt er qu e ya lo clas ificó dent ro del prim e r g r up o,
entre Eu tid emo y Fedó n. Po ste riorment e, H . va n lS eL Sprac hlic he Fo~sch u nge n ¿u r Chronolagie drr p/ellon i¡chen
Via/ o¡¡e, Vien a, 1912 , y Die sp rachliche Fo~schun g als G.undlage der C/lra'
rw/ ugie der plaw nische n Dia/oge l< nd des . K ralyloso, Lcipl.ig, 11l2Y.
JJ En lo s t r a b ajo s citados de ca da uno. J6 . The Date .." , anl. cil.
l' cr. - On Hypo lhesis in rhe Craly/us as a n lndicatlo n of thc Pla ce JI el'. . The Dat e of lh e Craly/uso, Amer. JO"nl. of Phi/o/. 85 (1964),
of the Dialo gu e un rhc Sequen ce of Dialogue s », Phron esis 9 {1964), 114-116 , 136·154.
360 DI Al OGO S CRÁTI LO 36 1

aasei . d y vol:i v (MSS .). ( j" LPSCHIoII OT, V ., Essai sur le «Cratyte •. Com ribufi(m a1'/lisl oi n! de la Pf!"'
390b3, 39t b!. 393a5, sin co rc he tes . sü de P/1l 10n , Pllr ls , 1940 .
395a8, 1!Xt¡90oC; 'U: l(a l Ka pu p l o: (MSS ,) . ¡¡UT" ~ l t , W. C. K., A Hil lory v I Grcd: pJr j/osophy, vo l. 11 1. r'a m bridge, 1% 9,
39Sc4. s in co rc hetes . y V, Ca m h ri,j~c , 1978.
397dl , [nllll;J e¡oó<; [Tcst jm . de TllEOOORETO, Th era peu t .• pá g. 69), 1I0RN, F., PI,,/v l1sludien, \l ien a, 1904 .
397d8·d , ' E PM. 60:[1-IO'V0:<; • • • ó~e p/~nll)VC;. 1:0. 6O: (IA OV(l"l;; (5n¡. (ll EREN, J . VAN. De . Cralylo. herodileo el de p/Q lOnis oerolyl o . (Mnem osy-
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CRÁTILO

HER MÓGENES, CRÁTILO, SÓCRATES

HERMÓG EN ES l. - ¿Quie res, e nt onces, que hagamos 383a


pa r ti cipe ta m bién a Sócr at es de nuestra conversació n?
C RÁTI LO 1, _ Si te pa rece bi en ...

Hi jo de Hipónieo y he r mano d e Ca lía ~ (d . n . 2 1). Po r eltesrimc-


nío d e J ENofU Nn (Me"'oTllbiliIl 12, 4 &; 11 JO, 3, Y & ..quel e VIII 3) sabe-
mos q ue e ra u no de lo s In timos de Só<:: rates: le in sl iga a que p repare su
d isc urro de defe nsa y as i ~t e a los u ltimo s mo men to s de la v ida del me e s-
t ro . No se le co noce co n ee r telil lld sc r ip c ión a e sc ue la o g r upo fi los óf ico
a lgu no . DlóGENES L~ ERe lo { 1I16) le hace pa rtida r io d e Parmén ide s, peru
e llo pu ede d ebe rs e a un a pola ri za ción fr en te a l be racliusmc d e Crátilo
(d . F. AST, Pla lCm s Lt ben und Sch rifle 01. Lei pzig, 1816, el a líí). Aqu í se le
prese nta como un hom b re de poca pc-rwna lida d , a u nq ue b íe n d ispue~to
) af able , e n co ntra posic ión .. Crá ti lo. S us inte rv e nc io nes. se re du ce n a
a se n ti r Il lo q ue d ice Sócra tes, si b ie n a lgu na in terve nc ión s uya hace p ro-
greu r notab le me n te e l d iilogo tcf., sob re todo, 42 1e y n . 1431.
1 Pe r~onaje cu ya re a lidad b iog rá fica es u n la n to oscu ra . Tene rno s
so b re t I poc a s no tici as y, aun t slas, cont radic to r ias u di f icil es de con ju-
gar: a) po r e ste d iá logo s a bem os qu e sostiene sim u ltán eam ente la reona
natu ra list a d e l len guaje y la fHosofla de He rá cli to ; bl q ue es joven (e l.
«Odl, de c a rác te r te rco y d e esca sa valla Imelec rua f el AM ISTdTI!LEs (Me·
Illfisíca 10 10.. 71 5) d ice q ue Crá ti lo hab la re n u nciado a l le ng ua je porque
e ra un he ra cl iteo rad ica l y K lrrmtab.. a hac er s ignos con la $ mano s; d)
AIt15l dTELuo(Me lllf. 98 7 ~ 2 n .) dic e qu e Pla tó n Iu e S" d lhls ecompañe-
ro . de Crá ti lo ; el DlOO tNE$ t..u _It(;lo (11I61 y PMO(:w (( n P/alonis CTllty/ um
Comm el'ltGrii) d icen qu e PIa IÓn fu e d isClpu /o de Crá l ílo. - Pues b ien , (e)
se de riv a pr o bab le me nte (y e s in terp ret a ción e rrón ea ) de (d), pero ade-
ma s, es difici l de conju ga r co n (b). A su vez, (e) con t ra dice -y es má s
364 DIÁLOGO S (' KÁT I LO J6S

HERM. - Sóc rates. aquí Crá ti lo afirma que ca da uno gun este, e s la base para la formaci ón del oyen te so b re
de lo s se r es ti en e el nombr e exa ct o por na tu r a leza. No que e l temu, no habría na d a q ue im pidi era que t ú conocieras
sea és te e l nom bre q ue im pone n a lgunos llegando a un (' 11 este ins ta nt e la ve rdad sobre la ex actit ud d e lo s no mo

ac ue rdo pa ra nom brar y as igná ndole un a fracció n de su brcs . Pe ro, ho y po r ho y. no he escuc hado má s que e l d e
p ropia leng ua , s ino que todos los ho mbre s. tanto g r iego s IIlIa d rac ma ' . Po r consigu ien te igno ro cómo se rá la ve r- e
b como bárba ro s. tienen la mism a exac tit ud en sus nom bres, d ad so b re t a n se ri o a s u n to. Con tod o , es toy di spue sto a
Así qu e le pregunto si s u nom bre, Cr áti lo, responde a hl inves tig arlo e n co m ú n co n ti go y c o n Cr á t ilo. En cuanto
re ali dad, y con tes ta que s í. ~ ¿ Y c uá l es el de Socrates r-, a su a firm a ció n d e que Hermógene s no es tu ver d a de r o
p regunté, e S ócrate s », m e con te stó. «¿ E n t onces tod o s IUI nomb re , so sp ech o - es un d ecir- qu e es tá c ha nce ándo-
ot ro s hombres tienen también el nombre qu e da mos a eli- se. p ues ta l vez p ie n se que fra c a sa s un a y o t r a vez en tu
d a u no h Y é l d ijo: «No , no. Tu no m b re . a l m en o s, no e s d e seo de pose er r iq ue za s. Es d ificil , como d ecía hace un
Herm ógenes n i a unq ue te lla me así todo el mu nd o - l. Y instan te , lle ga r a l co noci m ie nt o d e ta le s te mas, pe r o no
c ua ndo yo le p reg u nto ardie nd o en deseos de sabe r qu é q ueda m á s r eme dio q ue po ne rlos e n e l c e n t ro e in d a ga r
q uie re decir, no me a d a r a nada y se m ue s t r a irón ico co n. s i es como t ú dices o como di ce Cr á t ilo.
3841:1 m igo. S imu la q ue é l lo tiene bien claro en su m en te , como H ER M . - Pues bien, Sócrates, yo , pese a haber díalo-
quien co noce el asun to. y q ue s i q u is ie ra habla r claro ha. ga do a m en udo con éste y con muchos o tros, no so y ca -
rí a que in cluso yo lo admit iera y di jera lo m is mo que é l paz de c r ee rme q ue la exa c t itud d e u n no mbre se a o t ra
d ice. Conque s i fu era s ca paz d e in te r pretar de a lgú n rno- c os a que pa c to y co nsenso ". Creo yo, en e fec to. que c ual- d
d o el oráculo d e Crátil o. co n g usto te es c uc ha rí a . O a u n q u ie ra q ue se a e l nombre q ue se le po ne a al guien. éste
m ejor: me r esult ada a ú n más a grada ble sa be r qué op ina s e s e l nomb re e xa cto. Y q ue s i, d e n uevo , se le cam bia po r
tú mismo sobre la ex ac ti tud de lo s nom b res -siem p re que o t ro y ya no se llam a aquél- co mo so le mo s c a m biársel o
lo desees. a lo s escl a vos-c-, no es menos e xa cto és te que le sust it u ye
SÓCRATRS. - Hermógene s, hijo de Hi pónico, di ce un ano
b tiguo prove rbio que es difici l sa ber có mo e s lo bello, Y, gos d iferen cial es d e los s inó n imos apa re n tes. En rea lida d , la exactitud
desd e lu e go. e l co noc im ie n to d e lo s no m b res no re sult a q ue e l p rop ugna nad a nen e q ue ver con la orlhó lts q ue aq u¡ se d isc ut e .
Sóc ra tes fue u n g ran a d mirador suyo y se pie nsa q ue su cé le b re d iOlíreSIS
Insi gnific a n te . Claro. que si hubie r a es c uc hado ya d e la . (d. Cdr..,ides ló3d , P roldgo ru 358al p ued e ha ber inl1uido e n la s dícoto-
b ias d e P ródico " el c u r so d e ci nc uen ta d r a cm a s que . se. mtes socrilic as Id. W. C, K. GIfI HlJ E,A Hísto ry 01 GruA- Ph ilosaph" pá gs.
223-25 )' 274-80, Y C. J. Cu ss u '. _The SlUdy o f La nguag e a mo ngsl Soc r..·
probable- que (a). Sobre el problema de co nju ga r el na turali sm o y he- tes" Ccnte mpo ra rteas, P, ac. a f rhe A /r. Ctass: A ssoc:. [19591 38).
rad itislTlO de Cr'lllo. véa ~ nu t'sl ra In tro d ucc ión, 1 Podría qu erer decir q ue ha leído a lgún libro de Pródico: u na drac-
I Tant o K'''tjlos como Sokrrili s son nombres fonnad~ sobre el sus- ma es e l p rec io a proJ.lInado d e u n libro en es ta e POCil (d . Apo lo gÚl l ód l
ta n tivo k rdlw .dom i n jo ~: e l de Sóc ra tes, ..demás, p resen ta la ra'z .SOl...". )' de mas ia do poco, incl uso, pa ra u n curso red ucido.
q ue es tá en la bas e de pa la bras d e var io s ign ifk a da. _ Hen .w g¿ni s s igo • He nn6ge nes em plea Unil tc rm ino logla \llIga, propia de quien no ue -
nif ic.. «delhne]e de He rmes-, y es te nomb re no le co rrespon de, debi do ne las id r as mu y claras o "",pres a, no u na sec na , s ino u n clima de opio
a sus difi cuha des pecu n ia ri as (d. 384c y 391a) y, com o é l mism o añade n i6n. Aqu' em plea sy n lhl kl y ho motogta; má s aba jo, nómos y ¿¡hos. e l'.
má s ta rd e (d . 408a), a su poca fac ilidad de pal ab ra. ln rro d. Tradu zco Ilóm os po r . co n ven c i6 n~ , en s u valor más gene ra l, y,
• Céleb re sofis ta, na tu ral de Cea s, cu yo interés se centrab a en el cm. alg una vez, más ad elant e, por . 1,1 50 ' . Pa ra >Iomolh illes em pleo el t érml-
p Ico correc to d e las palab ra s (d. E utid emo 277e) es tab leci endo lo s ra s. no com ún men te adm iti do de . Iegisla do r> (c f. 389a).
366 11lÁLO GOS CRÁ TI LO 367

q ue el prime ro '. Y es que no ti en e cada uno s u no m bre H ERM. _ Desd e lu ego qu e sí.
por n at u ra leza a lgu na , s ino po r con vención y há bi to de S6c . _ ¿ Luego ha bría un d iscurso ve r da de ro y o tr o
e qu iene s s uele n po ne r nom bres. Ahora que si es de c ual- fa lso ?
quier otra forma. estoy di spuesto a ente rarme y escuc har- H U M. - Desde luego.
lo no sólo de la bios de Crát ilo. s ino de cualqu ie r ot ro. S6c. _ ¿ Acaso. pues, será ve rdade ro e l qu e des igna a
38 Sa SOCo _ Hermógen es, pu ede qu e, desde lu ego . di ga s al- los seres como son, y falso el que Jos desi gna como no so n ?
go im po rt an te. Conq ue cons ide ré moslo: ¿aquello que se H ERM. - S i.
lla ma a cada cosa es, segú n t ú, el nombre de cada cosa? SOC. _ ¿ Entonces es po sible de sign a r media nt e el di s-
HER M. - Pie n so q ue s I. cu rso a lo que es y a lo que no es?
Soc. - ¿Ta nto si se 10 llama un pa rtic u lar I como H ERM . - Desde luego.
una ci udad ? SOC. _ ¡ y el d iscurso verdadero es acaso verdadero e
H E RM. - SI. en su totalidad y, en cam bio, sus partes no son verda-
Soc. - ¿Có mo, pues ? Si yo nom b ro a cualquier ser..., de ras?
por ej em plo. si a lo qu e ac tualmente llam am os ehornb re » H ERM. - No, también lo son sus parte s.
lo denomino eca bal loe y a lo qu e ahora llamamos «ca be- Soc. _ ¿ Aca so su s partes grandes son verdaderas y la s
llo . lo denomino «ho m bre .., ¿s u nombre será hombre en pe queñ-as no? ¿O lo son todas?
gene ral y ca ballo e n particular, e in versamen te , hombre H ERM. - Todas. c reo yo.
en particu lar y ca ballo en general ? ¿ E s es to lo que quie- Soc. _ ¿ Existe, pu es. alguna parte del discurso a la qu e
res decir? pu eda s lla m a r más peque ña que el nom bre ?
b H ERM. - Pienso que sí. H ERM. - No . Es ta es la más pe queña.
soc. - Pro sigamos. pues. Dim e ah ora es to: ¿hay a lgo SOC. _ Bien. ¿ Acaso el nomb re d el disc u rso ve rdade -
a lo q ue lla mas «ha b la r con verdad .. y «ha b la r co n ro recibe una calificación?
fa lsedad .. 9? H UM . - Si.
Soc. - Verdade ro. si n duda. como t ú a fir mas.
7 Ha y e n e l te xto griego d e IOdos los MSS . (sa lvo n dos Ir a se s de H ERM. - SI.
idén t ico co men jdo (. no es menos e U CIO el segund o que el p rimero. y SOco- ¿ Y la parte del fal so es una fal sed ad ?
«no es menos e xec ro és le que le s u slil uy e q ue el p rimero . ). de la s cuales.
H ERM. - Asl lo afirmo .
u na es, si n duda . glos<l de la (Itra . Con lra la o p inión ge ne ra l q ue ad m ite
a m bas c o me genu ina s (1 q ue s igue a Be kker o mit iendo {con el MS. n la SOco_ ¿ Es po sibl e, e ntonce s. calificar al no m bre de
segun da . no so t ro s pre fe r imo s s upone r (co n Ba il e r) q ue es la p rim e ra la fa lso y verdadero, s i t a m bién lo hacemo s con e l
q uo:- no e s a utént ica. di scurso ? lO.
I Aqul Sóc rates lle va a He rm óge n es a u na posición de extremo In-
d ividua lismo, que no es la inicia lmen te exp u esta (cf., también, el § e , más 10 Pa ral ogism o se ña lado po r H. SrEIN THA l. , Gescñich re der Sprach-
ab ajo). So bre las razones de este proce der de Sóc rates , ve r nu estra Int rod . w isse nschaií bei de n Gnechen und Róm ern, Ber lln, 196 1, pltg. 86, Y R.
• E l p rin cipio d e que se puede habl ar fa lsamente, introducido a qu í ROll lNSON, e The Theory al n emes in Plato's eratylus_, Phi/o Re". 65 (1956),
un tan to brusc am e n te es, en rea lidad, el argumento má s poderoso con- 328 . Una fr u e p ue d e se r fal sa y todus su s nombre s ve rd ad er o s. Plat ó n
tra am ba steorla s. De a h! el in terés , por parte de Sócrates, de dejarlo se n· no ha bla llegad o a descubri r (o lo s ilencia por el ínte r és de la argume n-
tado in med ia ta me n te . Es un lem a qu e reaparece en Eu tidemo 286b, c y ta ción) que la fr a se cons tttu ye una u n ida d superior y no u na me ra su ma
Sofisr a 25( a , b . de s u s partes (e f. GUTllllIE, A Híst o ry..., pág . 2131·
368 DI ÁL OG OS C RÁTI LO 369

d H Ell.M . - ¿Cómo no? H ERM. - ¡No, no, po r Zeu s! Más b ie n lo he e xpe ri men-
Soc. - ¿ Acaso e l nom b re qu e carla uno a tr ibuye a U II lado m uchas vec es, ha st a el punt o de c ree r que ha y a lgu-
obje to es el nom b re de cada obje to ? nos hom bres comple ta mente viles y en núme ro e levado .
H HRM. - Sí. SOco- ¿ Y qu é ? ¿ Nu nca te ha parec ido qu e ha y hom-
So c. - ¿E ntonces también c ua ntos se a tribuyan a en. bre s com pleta m ente buenos ?
da ob jet o, todos ellos se rá n s us nom bres y en el mome nto H EIl.M. - Sf, m uy pocos.
e n que se les a t ribuye ? soc. - ¿ Luego te ha parecido q ue los hay ?
H ERM. - Yo de sde luego. Sócrates, no conozco pa ra ~ I H ERM. - S i , si.
nomb re ot ra exact itud q ue ésta: el q ue yo pueda d a r a ca. Soc. -¿ Cómo , e nto nces, fonnu las esto? ¿ Aca so que
da cosa un nombre. el que yo ha ya dispuesto. y que tú puco los completamente buen os son comple tamente se nsato s
t da s darle otro, el que , a tu vez, di spon ga s. De es ta form a y los comple ta mente viles completame nt e insen sa tos ?
veo qu e ta m bién e n cada una de las ci uda des ha y nom bres H U .M. - Ta l me pa rece. e
di s tin tos pa ra los mism o s obje to s: ta nto pa ra u nos gr¡e- Soc. - ¿ En tonces es pos ib le q ue unos seamos se ns a-
ga s a diferencia de otros, como pa ra los gri egos a dífe re n- tos y otros in sen sa tos, si Pr ot ágoras dij o la verdad y la
cia de los bá rba ros. ver da d es que, tal como a cada uno le parecen las cosa s,
Soc . - ¡Va ya ! Veamos entonces, Hermógenes, s i tamo así son ?
bién te pa rece que s ucede así con los se res: que su ese n- H ERM . - De ninguna manera.
cia e s di stin ta para cada ind ivid uo co mo mante nía Soc. - Esta es, a l me nos, tu firme c reencia: qu e s i e xts-
Pro tágo ras 11 al deci r que «el ho mbre es la med ida de to- le n la se n sa tez y la in sensate z, no es en a bso luto posible
386a da s las cos as » (en el senu dc , s in duda , de qu e tal co mo qu e Pr otágoras dije ra la ver dad. Pues, en realidad, uno no
me parecen a mi la s cosa s, asl son para mí , y tal como te se ri a más sensato que otro s i lo que a cada u no le parece d
parec en a ti, así so n pa ra ti), o si crees que los se res t ie- es la verdad para cada un o.
nen u na cie r ta cons is te ncia e n s u p ropia ese nci a . H ERM . - Eso es. ·
H ERM. - Ya e n ot ra oca s ión , Sócrates, me dej é a rras- Soc. - Pero t am poco , c reo yo, piensa s con Eu ti-
t rar por la ince rti dum bre a lo qu e afir ma P ro tágora s. Pe- demo 11 que todo es igua l pa ra todos al m is mo t ie m-
ro no me pa re ce q ue sea a sí del to do. po y en todo momen t o. Pues en es te caso tampoco se rí a n
So c. - ¿ y qu é ? ¿Tam bié n te ha s de jado arrest ar a la unos bue nos y otros viles, sí la virtud y el vicio fueran igua-
b c reencia de que no ex is te en a bsolu to ni ng ún hom b re vil ? les para tod os y e n todo mo mento.
H ERM. - Es ve r dad lo que d ices.
11 Es e l so fista de Abdere. b la nco de lo s a taq ues p la lónicos en lIa_ Soco- Por cons iguiente. si n i todo es pa ra tod os igual
n os diálogos (es !>""ia lmen te, e l que lIell' su no m bre . pe ro cf ., I.m bien, al m ismo tiempo y en t odo momento, ni tampoco cada un o
TU lel o 152 s s.). L¡" c ita es el cé lebre com)¡enz.o de su o br. AlllheiA . LA
VerdAd · le l _, mÍlS abajo . la alu s ió n a t sta). Au nq ue e s ta f ra se, Iue re de
de los seres es di st in to para cada ind ividuo, es eviden te e
lodo eun lu to, ha s ido objet o de múl ti p les íme r pre ta c jo nes (d . G UT H RIE.
ibid .• pi g s. 181-19 11. e s evid en te q ue lo q ue p re ten día el solis la es neg ar u Co n su he rmane Dion iso doro , es el p ro tagonis ta del d iAlogo q ue
va lide t objelilla al ccnoc trmen to. Otra cos a muy d isti nt a es q ue de s u e pis- llc.... su no mb re . La tesis q ue aq ul se le a tri buye es Iormulade alll d e for-
lemo logía in di vid ua lis ta se p ueda ded ucir un a teoría de la onhoepeia co mo ma di fere nt e : • lo dos los h om b res, di jo ti . lo sa be n lodo si sabe n una sola
la qu e ma nt ie ne He r mógenes . Ver nue stra ¡n trod . co sa» (Eu lid e mo 294a . cf. ta mb ié n 296c).
61. - 24
370 DI,\ LO GOS CRÁTIL O 37 1

q u e la s co sas po seen u n se r p rop io co ns iste nte. No tienen SOC. - Entonces, ¿ ac aso s i u no hab la co mo le p a rece
rela ció n n i de pe ndenci a con no sot ro s n i se d ej a n arras- q u e h ay q ue hab lar lo hará correc tamen te ha bl a n do así ,
rra r a r riba y abajo po r ob ra de n u es t ra im a gin a ció n , sino o lo ha rá c o n m á s éx it o si ha b la como es n a t u ra l q ue la s e
q u e so n en sí y con re la c ió n a s u p ro pi o ser co n fo r me a cos as hable n y sea n ha b la d a s y con s u in st ru mento n a tu -
s u nat u ra leza 11. r a l, y, e n caso contrar io, fraca sará y no co nseg u irá na d a ?
HER M. - Me parece , Sóc rates, que es así. H ERM. - Me p a re c e ta l como dices .
SOC. - ¿Aca so, e n to nces, lo s seres son a sí por natur a- Soc . - ¿ y e l nom brarnoes u na p a rt e del hab la r ? Pue s
leza y la s a ccio ne s . e n c amb io, no so n d e la m isma fo r m a ? s in d uda la ge nte h a b la nombra ndo.
¿O es qu e la s accione s . ta mb ié n e llas. no const it uyen u na H ERM. - De sde lu ego q u e sí.
cierta es pecie den t ro de los se res? soc. - ¿ Lu ego tambi én el n omb rar e s u na a cción , s i,
HEIlM. - ¡Claro q ue sí, también e lla s! en ve rdad, el h a b la r e ra u na acción en r e la ció n con la s
387a S OC. - Luego la s acciones se realizan conforme a su c osas?
p ropia naturaleza y n o conforme a nuest ra opin ión . Po r H ERM. - Si.
ejemplo: s i inten tamos co rtar uno de lo s seres , ¿acas o ha- soc. - ¿ y nos r e su lta b a evidente que la s a cciones n o d
bremo s de co r ta r c a d a co sa la l co m o queramos y co n el ten ían r elación con n osotros, sino que poseían una n atu-
in st rum ento que que ramos ? ¿ O si d e se a m o s co r t a r cad a raleza su ya propia ?
co sa conforme a la n at u ra lez a del cortar y ser co r ta do y H ERM. - Así e s .
con el in s tr umento qu e le e s n a tural, corta re mos co n éxí- Scc. - ¿Lu ego tambié n habrá q ue nomb ra r co mo es
to y lo h a re mos recta m e n te , y. por e l contrario, si lo he - nat ura l que la s co s as no m b ren y sea n nom b ra da s y co n
ce rnas co n t ra la n a tu ra lez a , fraca sa re mos y no consegu í- s u in st r u me n to na tu r al, y no como no sotro s quera mo s, s i
r emo s nada ? e s que va a h a ber al gún a cuerdo e n lo a ntes d ic ho? ¿ Y,
b H ERM. - C re o que d e esta fo r ma . e n tal ca so, tendremos éxito y nombra re mo s , y, en c aso
Soc. - ¿ Po r e nde, s i también in tenta mos q u e m a r a l- con tra r io, no ?
go, ha b rá que quema rlo no conform e a cualqu ie r o p in ió n, H SR M. - Claro.
s ino c o n fo r me a la correcta? ¿ Y ésta es como c ada cosa SOC. - Veamo s. p ues . ¿ Lo q u e te n ia mos que cor ta r de-
ti en e q u e se r q uemada y q u e ma r y co n el in st ru me n to damos que hab ía q u e c o rt arl o co n a lgo?
a p ro p ia do po r n a tu r al eza ? H S RM. - S í.
I-IERM. - Eso e s . Soc. - ¿ Y lo qu e h abía q u e te jer h a b ía que t eje rlo con e
Soc. - ¿ y n o será lo de más de esta fo r m a ? a lgo? ¿ Y lo que h a b ía q u e talad r ar, h abia que ta la d r a rl o
H ERM. - De sde luego. co n a lgo ?
Soc. - P u e s bien, ¿ a ca so el h a bl a r no e s ta m b ién u n a H E RM. - De sde luego .
entre la s acciones? Soc. - ¿ Y, en to nces, lo q ue había que n o m bra r , ha b ía
H ERM. - Si. que nom brarlo con a lgo?
H E RM. - Así es . 388a
13 Otra pri nci p io que se esboza. aqu í, e n con tra de He rmógene s y se
So c . - ¿ Y qué se ri a a qu ell o co n lo que habr ía q ue
re pet i rá, a l final, del d iá logo (e l. 4 39c ·440) en co n tra d e Crá tilo . taladr a r ?
372 IH ALOGO S CRATI LO 37J
HE RM. - El ta lad ro.
Soc. - Por co ns igu ie n te, un tejedo r s e servir á b ien de
Soc. _ ¿ y q ué. a q uell o con lo qu e h a bría q ue tejed
la lan za de r a - y - bíen- q uie re deci r «co nfo r me a l olid o
H EIlM. - L a lan zad er a.
de tejer. -. Por s u pa rt e, un enseña nte l' se se r virá
Soco- i: y q ué, aq ue llo co n lo q ue hab r ía q ue no mbra r I
bie n l . del no m bre - y «bí en- quiere decir «co nfo r me a l
H I'.Il.M. - El no mbre. ofi cio de en senar •.
Soc. - Dices bien. Luego también el no mbre es un de l II EkM. - 5 1.
to in st r ume nto. Soc. - ¿D e quién es la obra de la que se servirá bi en d
H ERM. - De sd e lu e go. ,-,1 tejedor c ua ndo se si r va de la la nza de r a ?
Soc . - En tonces, s i yo preguntar a «¿ q ué Inst r umen -
HERM. - Del ca rpinte ro.
to es la la nzade ra z», i no es aq ue llo con lo q ue tejemos ?
Soc. - ¿ De c ua lq u ier carpinte ro, o del qu e conoce el
1-I1'.R M. - Sí.
oficio ?
h SOC. - y c ua ndo tejemos ", ¿q ué hacemos ? ¿ No sepa-
HF.RM . - Del q ue conoce el o ficio .
ramos la t rama de la urdimbre cuando se hallan
SÓC . - ¿ y de q uié n es la o b r a de la que se se r vir á bi en
e ntremezc la das ? e l tala drador c ua ndo se si r va del t alad ro ?
H ERM . - Sí. HUM . - Del he rre ro.
Soc . -¿ Acas o ta m bi é n so br e e l taladro po drás de cir
Sóc. - Aho ra bien , ¿de cual quier he rre ro, o de! qu e co-
lo mi smo q ue sob re los demás o bjetos? noce el ofici o ?
II EIlM. - De sde luego.
HERM. - Del que co noce e l o fici o.
SOC. - Ahora bien. ¿ pue des decir lo mi smo también
Soc . - Bien. ¿ Y de q u ién es la obra de la qu e se serví-
so bre e l no mbre ? ¿ Qué hacemos c ua ndo nombramos con
rá el e nseñante cu a ndo se s irv a del nombre ?
e l nombre e n ca lida d de in strumento?
HERM. - Tampoco sé deci rte eso .
H EkM. - No sé decirte.
Soc. - ¿ Acaso, en re a lid a d, no no s ense ña mos a lgo re -
Soc. - ¿Ta mpoc o puedes decirme, a l menos, quién nos
pro po rc io na los no m br es de los q ue nos servimos ?
cí proc ame nt e y d is t ing u imos las c osas ta l como son ?
HERM . -Ciertamente , no .
H1:'. RM . - Desde luego. Soc. - ¿ No crees tú qu e q ui e n no s los proporciona es
Soc. - Entonces e l no m b re es un cier to in st r ume nto el uso 11?
e para e nse na r y d is ting uir la ese nc ia, co mo la la nzade ra
lo es de l tejido. " Tradu ci mo s d idáska los po r . e nse j'¡ a n te_. no s in fastid io , a l obje·
Heee. - SI. to de co nse rva r el parale lism o d e los es que mas etimo lógico s.
SÓc. - ¿ La la nza de ra es para tejer? " Acept a nH>s la co njetu ra kat ós . bien. de u n co rre<: tur del MS . ('ois.
H EkM . - ¿ Cóm o no ? lime nu s. Pued e haber caído fáci lme nte por hap logra fJa.
tl Po r mu ch o énfasis que se ponga en soi, es evidente qu e ta m bién
,< F.n gr. kerkfu in , Ji\. . ma neja r la kerkfs (la nza de ra ). , a unqu e aq uí Sócrates Se po ne aquí de l lado del . uso . ('1ómo s) co n la ide a de Intro d u.
~'on el sen tido res trlngnlo de «sepa r ar-la tra ma de la u rdimbre ». S ócre- cí r en seg uida la fig ura del elegíslador-s (nomo lh¿tls). Se ha d iscu tido mu-
tes se refi er e e~ pec lfiC/l men t e a est a ac t ivid ad de l teje dor porque la mo c ho sobre la ide nt ida d del leg ís lado r de los no m bres o «no rntna do r» (es.
bié n co n . e l no rnb re.¿ di ~lin guimo s las cosas» (c f. 3SSb). De tod as las ae· pecialmcnte, s i se tra ta d e un ind ividuo, y este subre hu ma nu , o u na cu-
t ividade ~ ar te sa nales q ue se co mpa ra n con la de nom bra r, la más a d e- lccnvída d, pr imitiva o no). Sóc ra tes s e refiere a él , u nas veces, e n aín gu -
e u"da es, prec isamen te, la de «destra ma r •. lar y, otras, en plural, aunque - eso s i- niega clarame n te (e l'. 438c) qu e
374 OIÁl OGOS C RÁT IL O 375

HERM . - Asi pa r ece. II ERM. - Así lo c reo yo.


e ¿ Entonces el enseña nte se se rvi rá de la obru ti
S OCo_ Soc . - Por cons ig uie nte. c ua ndo se preci se lu b ri ca r
legis lador c ua ndo se s irva del no mbre? ti ll a la nzade ra pa ra un man t o fi no o grueso, de lino o de
HU M. - Creo que sl. lunu, o de c ua lq u ie r ot r a calidad , ¿ ha n de te ne r tod as la
Soc. _ ¿ y c rees t ú qu e cualqu ie r hombre es legh l, turma de la nzade ra y ha y que a plica r a cada ins t ru-
da r ? ¿O el qu e conoc e el oficio? IIl t' IlI0 ,~ la fo rm a na tu ra l que es mejor para cada ob jeto ? e
H ERM. - E l que conoce el ofic io. lI ERM. - Sí.
Soc. _ Por cons iguiente, Hermógenes. no es cosa ti Soc. - Y lo m is mo, por s u puesto, en lo qu e respec ta
cualq uier hombre el impone r nombres. si no de un «nc rrn 11 los demás inst rumen tos: ha y que encont ra r la form a de
389a nador ». y és te es, según parece, el legis lador. el cual. des de iust ru me nto adec uada po r nat uraleza para cada cosa }"
luego. es ent re Jos homb res el más escaso de los a r tesanos. upllcar la a la ma teria de la que se fa br ica el inst r umento;
H ERM. - T al parece. I'l' n) no co mo uno quiera , s ino como es na tu ral. Pue s ha y
Soc. - Pro siga mo s. pues. Considera e n qué se fija el tille sa ber a plica r al hierro, se gún parece, la forma de ta -
legisla dor para im poner los nombres; y pa rte, en tu exa - lad ro natu ralment e a pr opiada para cada obje to ,
men, de lo que antes dijimos. ¿En qué se fij a el car pin teo H f.RM . - Por s upuesto.
ro para fab r icar la lanzadera? ¿No se rá en lo que es tal Soc. - y a la madera la forma de la nzade ra natural -
co mo para tejer por naturaleza ? 1'. me nte a p ro piada pa ra cad a objeto.
HEllM. - Desde luego. H E RM . - Eso es.
b Soc. - ¿ Y qué ? Si se le rompe la lan zade ra m ien t ras Soc . - Y es que, se gú n p a rece, a ca da for ma de tejido d
la fa bric a, ¿vo lverá a fabricar otra fij ándose en la que es- h.' correspond e po r natu raleza una la nzade ra, etc .
t á rota, o e n aqu ella forma confo rme a la c ual ya fa bri ca. H ERM . - S í.
ba la qu e ro mpió ? Soc . - ¿ Entonc es, excele n te a migo , ta mb ié n n uest ro
H ERM . - En esta ú lt ima, c reo yo. legislad or tiene que sabe r aplicar a los son idos y a la s s l-
Soc. - ¿Te nd ría mos e n to nces todo el derecho de lla- labas e l nom bre natu ra lme nt e adecua do pa ra cada c bje-
ma rla «le lan zad e ra en si-? lo ? ¿Tie ne qu e fija rse en lo qu e es e l nom bre en sí pa ra
for ma r e im pon e r todo s lo s nom bres, s i e s que qu ie re se r
sea UIl personaje divino. De hec ho , e s una li gura qu e s urge d el proce so I1 n legi timo im po sitor de no m bres ? Y s i cada legis lador
re tu tauvo de la rec rre convencicnalista y se rá el ú lt im o reducto de l que 110 opera sob re las m ismas s ila ba s, no ha y qu e ignora r es-
Sóc ra tes va /1. de sa loja r /1. Cráti lo. lo : tampoco todos los herreros operan sobre el m ismo h ie- e
11 E sb ozo de la reorre de la s Id ea s, aú n e n fase tentat iva: e l l éxico
!TO c ua ndo fa brica n el mi smo in st ru ment o con el m is mo
nu e stá fijadu d el todo y e l sen tid o ú ltimo no se ve muy claro. Se gú n G R U'
al'., El p ensamiento d e Platón, Mad rid , 1973, p ágs. 38·39, aqui el eldos d e fin w; s in embargo, m ientra s apliquen la m isma fo rm a,
la la nzadera seda «e l co njunto d e sus p ro pie da de s esenc ia les tal co mo
lo ve (bUpei) el ca r pin tero ». Ya no es . 10 que una co sa parece, sin o aq ueo lo hli es te pasaje he mos tra du cido érgon «obr a - po r . ins trumento »
110 a lo qu e un a la nzad era se parece ... y ' ver ' se t ran s fo rm a de act ividad y órga01 0n • in stru mento > por «for ma del instru ment o » (asl como trYpa 'l all
ñs tca e n me nt a l•. el, ta mbién , B . CALVE RT, «For ma and Flu x in Pla to' . «la for m a deltaladro ». e tcj. co n el fin d e evitar la con tu sió n qu e se u ri-
Craty íut », Ph ránesis 15 (1970), 26 · 4 7 , Y J . V. LUCE, e The Th eory of Ide as gtn a r¡u de un a t radu cc ión litHa!.
in the eralyl lA s », ibid. 10 (1965), 2 1·36 , W F.lIoRN(plalOllstudien. Vien a, 1904, págs. 29 -30) ve aqui , c reo G" l'
376 DI Al OGO S ('RÁTlLO 377

au nq ue sea en otro hi e rro. el in st r um ento se r á corree I S(~C. _ ¿ y a l qu e sabe p regun ta r y r espo nder lo lla mas
390a po r m ás qu e se haga a q ul o e n tierr a bárbara. ¿ No es u. 1 11I .u ra cosa q ue di al éc t ico ?
H ERM. - Desde lu e go . II f.RM . - No, eso mi smo.
Sóc. - ¿ Pe nsarás. en to nce s. que ta n to e l legisla do r d SOC. _ Por consigu ien te, la o bra del ca rpintero es cons- d
aq ui co m o e l de los bá r ba ros, mi entras apliq uen la fcrm tt uit- un t imón bajo la dir ecc ió n del pilo to , s i es q ue ha
del nombre q ue convie ne a cada un o e n c ua lqu ier t ipo UI di' se r bueno e l t imó n.
sila bas.•.• pe nsa rás qu e el legisl ado r de aquí no es peor qu HERM . - ¡Cla ro !
el de c ua lq u ie r o t ro s it io ? Soc . _ y la de l le gis lador, se gún pa r ece, c o ns t r u ir e l
H EMM. - Desde luego. nombre bajo la dirección del d ia léc t ico, s i es que los no m-
b Soc. - Pue s b ien. ¿q uié n es el q ue va a juzga r s i se en hres ha n de es ta r bi e n puestos.
c ue nt r a en c ua lq uie r cl ase de m ade ra la forma adecuada HERM. - Eso e s.
de la nzade ra : el fa bricante. el ca r p inte r o o e l que la va 11 Soc. - Puede ento nces, He rm ógen es , qu e no sea ba na l.
ut ilizar. el tejedo r? 1,;0 100 tú cree s, la im po s ición de nombres, n i o bra de bom-
H E RM . - Es más razo nab le. Sócra tes. que sea el que hres vulgares o de c uale squ ie r a homb r es. Conque Crá t ilo
la va a ut iliza r. t iene r a zón cuan do afirma que las cosas t ienen el nom-
Soc . - ¿ y q ui én es el que va a utilizar la o bra de l la · bre po r nat u r a lez a y que el a r tesano de lo s no m bres no e
brica nt e de liras ? ¿no es a caso el que tiene la habilidad es cu a lq uie r a, s ino sólo aquel que se fija en el nombre q ue
de di r igir m ej or al operario y ju zga r s i, un a vez fab ri cu. ca da cosa ti e ne po r na tura le za y es capa z de aplicar su
da, es tá b ie n fabricada o no ? forma ta nto a la s le tras co mo a la s sílabas.
HU M. - Desde luego. HERM . _ No sé, Sócra t es, có mo habr é de o po ne r me a
SOco- ¿ y q ui é n es ? lo que dices. Con todo, qu izá no sea fá c il deja r se co nven-
H ERM. - El ci ta r is ta . ce r tan de repente. Cr eo q ue m e co nvenc e rlas m ejo r, s i 391'1
SOco- ¿ y qu ién con e l co nst ruc to r de na vío s ? me mostrar as cuá l es la exact it ud na t u ral de l no m bre qu e
e H ERM. - El pilo to. tú sos tie ne s.
s oco- ¿ y q ui én po d ría d irig ir m ejo r la o bra de l Iegis- SOC. _ Yo , por mi parte, mi feliz Hermógenes , no sos-
la do r y ju zga rl a , un a vez re ali zada , ta nto aq uí co mo e n- te ngo n ingu na . S in d ud a ha s olvidado lo q ue le di je poco
t re los bá r ba ro s ? ¿ No se rá e l q ue la va a u tiliza r ? a ntes , q ue no s a bia pero lo in da garía co nt igo. Y a ho ra de
HUM . - SI. nues t ra ind agad ó n, la tuya y la m ía, re su lta ya cl a ro. con-
Soc. - ¿ Y no es és te el que s a be pr e gunta r? tra nuest r a prim e r a idea. po r lo menos es to: q ue e l no m -
HERM. - Desd e lue go. br e ti ene por n a tu r al eza una cierta exac t itud y qu e no e s b
SOco- ¿ Y tambié n r es po nde r ? ob r a de cua lq u ie r hombr e el saber impo ne rl o bi en a c ua l-
HEIl.M. - SI. qu ier cosa . ¿ No es así ?
HERM. - Desde luego .
SOco- En to nces hay que investigar lo qu e sigue a es-
sin raz6n. o tro pllra logism o: lo s he r rero s o pe ra n so b re dif e ren tes t roro s to -si es qu e en verdad tienes ansias de s a be r lo-e: q ue
de l mis mo ma te ria l. pero lu s ila bas de án lh ropos y homo, po r eje mplo,
so n materi a les d ifere ntes. c la se de exact it ud se r á la suya.
378 DIÁI.O<;O S CRÁTILO 379
H ERM. - [Pues cl a ro que a rdo en deseos de sa be rlo! Soc. - ¿ No sabes que so bre e l Tia de Tro ya, e l q ue sos-
Soc. - In ves líga lo, entonces. tuvo comba te s ingu la r co n H e fe s to, dice Hom e r o:
HU M. - ¿ y có mo hay qu e invest iga rl o ?
di qu e los dioses llama n Jan to y los hom bres Escaman-
SOc' - La más r igu r osa invest iga c ión , am igo mio, ( {dro? JJ.
hace en compañía de los qu e saben, pagándoles dinero 'Y
d á n d~~es la s gracia s. Y és to s so n los sofis tas. a q uienes HERM . - SI. sI.
t ~ m ble n t u h e rm a~o Ca lias l . ha pagad o m uc ho d inero V soc. _ ¿ Pue s q ué ? ¿ No conside r as cosa se r ia e l cono- 392a
e lle ne fa ma de sa b io. Como tu no d ispones de los bíe ne ce r po r qué mo t ivo es má s exacto lla ma r K án th os a e ste
pa ternos, has de ins ta r a t u hermano y ro garle q ue l e e n. r io q ue Skám andros? Y, s i quie res, so br e el ave de la q ue
sc ñe a t i la ex ac ti tu d q ue, so br e ta l asunto, é l ha a pren d t- d ice ;
do de Protágoras. los dioses la lla man «chalk is » y los ho mbres «k j m i n-
H.I! II.M. - Ext ra ña se ría, cie r tamente, Sóc rates es ta su. [dis » 2<.
plica, si rech azo por com ple to La Verdad de Prot ágoras JI
y es tim o co m o s i va lie r a n algo las afi rm aciones de ta l ¿ co ns ide r as bana l e l sa be r c uánto m ás e xa c to es dar a es -
ve rdad. ta a ve el no mbre de chalk ís qu e el de kym indis? ¿ O e l de
Sóc . - Pue s si t a mpoco e s to t e sa tisfa ce . habrá q ue
Batíea y My ríne 1\ y t a ntos otros de éste y ot ros poetas? b
d apren de rl o de Ho m ero y los dem ás po e ta s. Pu ede q ue éstos sean dem asia do g r a ndiosos para qu e
los descubramo s co n nuest ras solas fuer zas: pero más pro-
II EII.M. - ¿ Y qué di ce Ho m e ro so b r e los no m b r es , SÓ'
e ra res. y dónde? pio de ho mbres , según c reo, y m ás fácil es d isti ngu ir, so -
b re los no mbres q ue at ribuye a l .hij o de H éc tor -s-Ska-
Soc. - En m uchos pasaje s. los má s g ra nd iosos y he.
m ándríos y Aslyána x 1"_. qué cl a se de e xa c ti t ud d ice
1I0s so n a quellos e n los q ue d is tingue los nombres qu e dan
a los m ismos o bjet os lo s hom b re s y los d ioses. ¿Es q ue que t iene n. Pues co noces, s in d uda, los pasajes e n que a pa-
no c r ees q ue dice a lgo magnífico y maravilloso e n es tos r ecen es to s ve r sos a lo s que m e refie ro .
pasajes so bre la exacti tu d de los nombres ? Pues desd e lue- H U M. - Desde Jue go.
Soc . -¿ Cuá l de lo s dos no mbres - Aslyánax o Ska-
go es evi dente qu e los d ioses. a l me no s, aplican co n e xac .
t ritu d los no mbres que so n por na turaleza. ¿ D no lo c rees
m ándrio s-« c rees tú q ue con sid era Ho m e ro más e xacto
tú asl? pa ra el ni ño ?
H ERM. - Bie n sé yo q ue s i les da n u n no m b re, és te es
H ERM . _ No sé dec ir te . e
Soc. _ Considé ra lo entonces de esta ma ne ra: si a lguien
exacto. ¿ Pero a c uáles te refieres ?
te p re gu ntara ..¿q uién c rees tú q ue a plica los no m bres con
m ás e xac t itu d, los m ás se nsa tos o Jos m ás inse nsa tos ? .. »
. )1 Hijo de Hipón ico y h.,Tman o d e Hermógen es. Es el hom h re má s
n.co d e Ate nas (. s u ca sa e s la má s g ra nde v pros pera d e la ci u dad . , Pr o. 1) c1. 1Iflldll XX 74.
Io.g.o .o.s 337d), arr ugo de los so fi5t<lS y. es pec ia lme n te . de Pro tá go ra s , d e l' lbid. XXIV 291. Es u na es pecie d e b úho .
quie n Pla tón le llam a <a d mims tra do r » en Teeteto 165... En s u Cas a se ce- J' ¡bid. 11 813. \4. "lto u lIlo es ca r pa do fr en te a Troy a.
leb ra ban f rec uent es re uni one s (cf. el d iá logo P ru tágo ras) y ban que tes con l. A part ir d e a hora sólo ap arecer án tra ns literado s lo s nombre s p ro-
lo s so fIsta s (d. el Ba "'que re d e Jenoton te). pios cua ndo vaya n a se r o bje to de an áli si s et imo lóg ico. En el re s to de
11 Ce. n . 1 J. los ca so , apa recerá n tran scrit o s seg ún las norm a s h abi tu a le s.
380 DI AlOGO S C RÁTl I.O 38 1

H ERM . - ¡Evi de nteme nte re pli ca rí a qu e l o s m ás soc. - ¿ y porqué así ? Pues yo mi s mo no lo e nt iendo
se ns a tos! del todo, He rm ógen es. ¿ Lo e nt iendes tú?
Soc. - Ahora b ien, ¿qu iénes c rees que son más se nsa. HU M. - ¡No , por leus! ¡Yo, no! (!

I~S e n una ciudad, las mujeres o los hombres, para refe- SOC. - ¿ Pero acaso. buen amigo. fue Homero qui en irn- 393a
r u-nos en general al sexo ? pu so a Héctcr su nom bre ?
H ERM. - Los hombres. H ERid . - ¿Y qué ?
SÓc. - ¿ y no s a be s q ue Home ro di ce que eran Jos t ro- SOC. - Para mi qu e tamb ién és te t iene un a ci erta se-
d ya nos quienes lla maban Asryá nax a l hijo de Héc tor, mlen- mejanza co n Astyána x y que estos nomb res parece n grie-
tra s qu e, evide ntemente. las m uje res lo llama ban S k amán- gos. Pues AtuU y Hék to r l'f s ig nific a n ca s i lo mi smo, uno
d r ías - pues to que los homb res le da ba n el nomb re de y otro son no mbres de re y: e n efec to , s i uno es «señ o r-e
ASlyá n ax 11 ? (á nax) de a lgo, ta m bié n es. si n d ud a, s u ..du eñ o . (hek ton:
HERM. - Así parece. Es evi de nte que lo domina, lo posee y lo .. ne ne - (échei). b
Soc. - ¿Acaso ta m bién Homero cons ide ra ba a los t ro- ¿O crees que di go nade rí as y qu e me e ngaño al pensa r que
yanas más se nsa tos qu e a su s m uje res? estoy pa lp ando la h uella, por así decirlo, de la opinión de
H ERM . - P ienso yo que sí. Homero so bre la exa ctitu d de los nomb res ?
. _Soc. - ¿ Estimaba entonces que A slyá/l ax e ra para el HFRM . - [No, po r Ze us! No me pa rece que te pa se eso,
runo un no m bre más e xac to que Skarná ndrios? sino que tal vez es tés alc anzando a lgo,
HER M. - ¡Claro ! Scc. - Al menos es justo, seg ún se me p in ta, lla mar
Soc. - Exa m ine mo s e ntonce s po r qué. ¿ Es qu e no ex. león al fr uto de l león y caballo al fr uto del ca ba llo J<¡. De
plica es tu pe nda mente el po r qué ? Dice. en efec to: nin gún mod o me refi ero a s i de u n ca ba llo nace, corno
e sólo él les de íendia la ciudad y los largos m u ros 1' , monst ruo, un se r dist into de un caba llo. Me estoy refi ri en- c
do a aque llo qu e es fru to de la generación na t ura l. Si un
Po r ello. pues, es ex ac to. se gún pa rece, lla ma r a l hijo del ca ba llo engendra co nt ra natura u n te r ne ro , que es, por na-
s alvador ..soberano de la ci u dad . (A sty ánax) que su padre
mantenía a salvo, s egun afi r ma Homero.
HERM. - Me parece evidente, lf Es tas do s el imolo gtas son con ectas. Iremo s señ a lando en not a a
pie d e pág ina la s q ue tu so n. En rea lidad . no pa sa n de un a ve inte na en tr e
má s d e c ien to vein tici nco y. a ún as í, son _falsas et imo log la s•• es d ecir,
11 Es c ie.rto qu e. en /liada XX II JOó, HONu o di ce q ue los tru ya no s s ue le n co ns is tir e n rela.c ionar u na pa la.bra con o tr a de s u misma ra lz.
le lla ma n Ast la nac te, pero nu nca d iceoomo le llama ba n las troyana s. S in El re st e es pura fa n tasSa (el . L M U 1DIUI, P/a/QII, Ou vn s COn/pltle s" vol.
e m ba~go, si a rirma qu e s o pad re, Hec to r. le llamaba E scama ndrio IVI V, 2.· pa rte : Cret yte. Parts, 1950, In trod ucción, págs. 18 y s igs .).
402). Con tan re bus cad o y poco hones to razona mie nt o, poede Pla ló n es, 50 M....ID IER (ib id., pág . ló) señala la incons is tenc ia de est e pa sa je .
l a~ irn nia ando so b re la lorma en q ue p ro ced ían los so fist as en s us Ha y do s p rinci pio s q ue se: contradice n: a) u n h ijo debe rec ibi r e l nombre:
e llmo loglas. de s u pa d re tlo cua l, des de luego, d eja si n jus lifica r el de és te): b) en ca -
l. e l. /liada XX II 507. Los MSS. ofrecen úyso y poti n. El camb io sos de filiación all\ina lu ra l.l ll nominació n se debe hac er se gú n el géne-
éty~o por b y lo se explica tá cilme n te (en el pa saje ci la do, Andróm a ca se ro. Es decir, d e hecho la ú n ica nommación JUSla en tod os lo s casus es
dl~ l~e a Asl ia nélct e); el ca mbio de p dl¡n por py las lo a d mite NA UCK en s u esta última . Pe ro es más: des p ués de an aliz a r, a cu n li nuació n, la eumo-
e~ lc lón d e la llíada, pe ro es pusib lem e nl e e rróneo. Se sabe q ue Platón logía d e a lguno s miem b ro s de la fam ilia de los Tuntálidas, d ond e a ún gr ao
cltnba a me nudo de memo ri a. vna vaga me nte este pr inci pio , luego lo a ban don a po r com pleto,
382 D IÁLO GOS CRÁ TI LO 383

tu raleza, fr uto de u n toro , no ha y que lla marlo pot ro, lIi Por ejemp lo, la beta: ya ves qu e, pe se a añ adi r e, t y a, na -
n o te r ne ro. Tam poco, p ien so yo , si d e un h om b re n a ce Jo da im pid e m a nifes ta r co n el nombre comple to la nat ura-
que no es fr u to de hombr e, hay que llamar hombre a e~ h' leza de aquel elemento tal co mo 10 que ría el legis lador .
fr uto . Y lo mi s mo sucede con los árbo les y con todo lo de- ¡Así de sa bio fu e pa ra im pone r b ien los nombres a la s
más. ¿O no eres de mi opinión ? le tras!
H ERM . - S oy de tu op in ió n . H ERM. - Creo que ti en es r azó n,
Sóc. - Dices bien. Vigílame, pue s, no vaya a in duc ir- Scc. - ¿ Ent onces no s haremos la misma cuenta tamo394a
te a error de alguna form a . Y es qu e, po r la m isma cu en- bíé n en el caso del re y ? En efecto, de un re y procede rá
d ta, s i de un re y nace un re to ño, hay que llama rlo rey. Na- u n rey, de un bue no uno bueno, de un bello uno be llo e,
da import a que sean unas u otras las let r as que expre san igualmente, en todos los dem ás casos : de cada raza na ce-
el mi smo s ignific ado ; ni tampo co que se añ ad a o su pr-ima rá un p roducto semejante, s iem pre que no surja un mons-
una let ra con tal que s iga s iendo do minante la esen cia de lruo . Y ha b rá que darles los m ismos nom bres . Podemos
la cosa qu e se manifiesta en el nomb re . JI e ngala na rl os con las sílabas hasta el p unt o de qu e a un
HERM. - ¿ Qué quie r es d ecir co n e sto? profano pueda pa recerle qu e los m ismos seres son dis tin-
Soc. - Na da com plic ado . Tú sabes que a los ele- tos entre sí. Lo m ismo que a noso t r os nos parecen d is tin-
me ntos JI les damo s nomb re sin qu e pronun ci e mos los tos, siendo los mismos, los fá r macos de los médicos cuan-
elementos mismos , excep to en el caso de cua tro: la e , la do están variado s con colores y olores - mie nt ras que al b
ti, la o y la o 13. En ca mb io, a los de más, ya se an vocales mé d ico, en tanto que observa la vir tud de los fá rm acos,
e o co ns ona ntes H , sa be s que les añadimos otra s le tra s pa- le pa recen los m ismos y no se dej a im presionar po r los
ra pronuncia rl os con vir tiéndol os en nombres. Pero, con elementos a ñadidos- , de la mi sm a forma, quizás, también
tal que le impongamos manifiestamente la poten ci a suya, el e xpe rt o e n nom b res ob se rv a s u virtud y no se deja irn-
se rá corre c to da rle el nomb re qu e nos lo va a designar. pres ionar si se añ ade una le tra, se tran smut a o se s up r i-
me, o b ien s i la vir t ud del nombre res ide en ot ras let r as
JI Es la p rimera vez q ue Sócrates in tro d uce es ta idea, que repetirá
co mp letamente diferentes. Lo m ismo que - como decía-
con tin u a men te (d . 399a. 404e , 405e , 407c , 40Sb, 409 c, 4 12e , etc,) ha sta mo hace un mo mento- Astyánax y Hék to r no tie nen nin-
que la teoría d e la m{m esü la pon ga e n en tre dicho. Algu no s comentllris. guna let ra en común, sa lvo la t, y, sin e m ba rgo , signifi can e
!¡,. (d. n uestra l mroducci án¡ e logi a n la sag aci dad llngüístlca de Pl a·
Jo m ismo.
tón por in tu ir la re a lida d del camb io fo nético. Pe ro ello no e xige u na gr an
reflex ión y - a d emá s- Sóc rates lo a duce para ju s tific a r la s fantást icas
Aún más: ¿ qué letra tiene en co mú n con éstos a rché-
e timo logías qu e vien en a conti n uación. po lis ? Y, sin e mbargo, sign ifica lo mi smo, Ha y otros mu -
JI En gr. Sloic hefa: se refie re a lo s fonemas 0 , me jor d icho, las le. chos nom bres que no sign ifican otra co sa que «rey » y
tr a s del alfa bet o. So bre la co nce pción «grá fica» de l lenguaje q ue impregn a o tro s, a su vez , que s igni fica n «general », como, po r ejem-
todo el diá lo go y q ue ha sido o bjeto de crl tica, c f. n . 157 .
p lo, JÍ gis, Polém arch os y Eupóle mos J I . Y otros , en rcla-
JJ fJcctivamen te, los nomb res epsi/un, ypsilun, onncro n y ómegil da -
tan de época b i?_a n tina . a un que ya hay in dicac io nes en H tR ODlAi'l O, Partí - c ión con la med icina: latro k lés y A kesímb rotos ".
uoues 162. J5 Archépolis es «El qu e go bierna 1" ciudad.; A¡:is, «Cond uctor »: Po--
j' Lit. «sonoros» o «m udos •. En 424c. a ñade un a terce ra categc rta. /en1~ rc h O$,«Jefe J e guerra., y Eupólemos, «Valie n te en la guerra •.
la de lo s que e no son son oros pe r o ta m po co m udos » o s ea, la s so nantes . 'o 1~l ro k lés es «Fu moso curado r », y A kes{m b rolOs, «Curador de lo s
Cf . n. 148. mort al es •.
384 DIÁLOGOS CR ÁTiLO 385

Conq ue puede que ha lláramos otros muchos nombres Sóc . - En efecto, puede que Aga m ém n6 n s ea el indi-
que difieren e n sílabas y letras. pero dicen lo mismo en viduo capaz de lleva r hasta el final sus decisiones, así co-
lo que toca a su virtud. ¿Te parece as í o no? mo de aguantar a fuerza de valor y pone r término a sus
d HERM. - Desde luego q ue sí. des ignios. y prueba de ello es la permanencia y tenacidad
Soc. - Pues bien, a los seres que nacen confor me a nu de su ejérc it o en Troya. Así pues, el nomb re de Agamém-
t ura leza ha brá qu e darles los mismos nombres. nim significa que este hombre es «admirable » (agastós) po r b
HERM. - Desde luego. su «perseverancia» (epímon e).
Soc. - ¿ y qué haría mos con los que nacen contra na· Quizá tamb ién A t reú s sea exac to, pues su asesinato de
ru.ra, los qu e se originan bajo la forma de mon struos ? POI' Cr is ipo 40 y la s atro cidades tan grandes 41 qu e cometió
ejemplo, si de un hom bre bu eno y piadoso nace un con Tiestes son hechos dígnos todos de castigo y «funes-
impío 37 . .. ¿no es cierto, como decíamos an tes , que si un tos » (at erá) para la virtud. En rea lida d , la derivación de
ca ba llo te nía un engendro de bov in o, no debía llevar el s u nombre peca un po co de desvi ación u oscuridad para
"nombre del pa dre, sino el de la raza a la q ue pertenece ? no re vel a r a todo el mundo la n aturaleza de es te hom bre.
HERM. - Desde lu ego. Pe ro a c ua ntos h an oído lo suficiente sobre los nombres,
e Soc. - Lu ego también al im pío qu e nace del piadoso el de Atreo les revela claramente lo que qu iere significar.
habrá qu e asignarle el nombre de su estirpe . En efecto, su nombre está bien pu esto por todo: por lo, «im -
HERM. - Eso es. placable » (ale irés), lo «audaz» (álre ston) y lo «funesto» e
Soc. - No el de Theóphilos n i el de Mnésitheas JI ni (ale ró n).
ninguno por el est ilo, sino el que s ignifi ca lo contrario a Creo que tambíén a Pélop s le viene el nombre a medi-
éstos - s i es qu e e n verdad los nombres participan de la da, pu es és te significa que qu ien ve lo de ce rca es di gno
exactit ud. de ta l a pelaci ón .
HE RM . - Nada más justo, Sócrates. HERM . - ¿Cómo, pues?
Soc . - Lo mismo qu e el de Orést és, Hermógenes, es po- Soc. - POI' ejemplo, se alega de algú n modo contra este
s ible que est é bien puesto, ya fuera la casualidad, o algún homb re que, en el as esin ato de Mí rtilo '1, fue incapaz de
poeta quien le diera nom bre pon iendo de relieve con éste ad ivinar o prever nada de lo que íba a af ectar, en el futu-
lo feroz de su natural, así como su ca rácter salvaje y «mon-
t a raz» (o reínos¡" .
'0 Según un a rama de la leyenda. Atr eo y Tie ste s, in s liga d<lS por su
395a HERM. - Así parec e, Sócrates.
madre Hipodamía, mata ron a s u h ermana s tro Crlsipo a fin de qu e és te
Soc . - También parece q ue su padre t iene el nombre no le s desposeyera de la h ere nci a. Seg ún ot ra ra ma , Layo se en amoró
conforme a natural eza . d e Cr isipo. lo rapt 6 y éste se suici dó por vergüem.a. Sócrat es s igue la ver-
HERM . - Claro. s ión qu e interesa a su a rgu mento.
. 1 Como venganza po r hab erse a poderado inde bid amente Tlcstes de!
corde ro de oro - y. po r tamo, de la herenci a d iná stica- , Atreo ma l6 a
17 Anacol uto que q ueda resueho en la sigu iente interven ción de lo s hi jo s de su hermano y le si rvi6 su s miembros en u n b an q ue te.
Sóc ra te s. 41 Hijo de He rmcs y auriga de E nom a o, a l c u a l tra iciona en favo r
), Theophílos es . Pro tegido de los d io'e s ». y Mnesitheos, .EI que de Pé lope. Co n su ayuda, és te venció en la co mpe tición de ca r ros c uyo
pi en sa e n los d ioses •. pr e mio era la ma no de Hi poda mí a. Según u na vers ión. Pélo pe lo mató
sv E timo lo gía correcta. p ara no pagar e! precio de su traición.
6 1. - 25
386 DIÁ LOGOS C RÁTI L O 387

ro, a toda su estirpe - de lod o el inf or tunio que la col mó-e, tu r ale za de l dios y es to e s, p rec isamente , lo que co nvie ne
d por ver só lo lo q ue tenía ..c erca » (e st o signific a pé las) y q ue un no m bre sea c a paz de expr es a r. y es q ue , ta nt o pa -
lo m o me ntá neo, cuando a ns iaba co n se gu ir po r cua lq u ier ra noso t ros com o para los dem ás, no ha y u n ma yor c au-
me d io la bod a con H ipoda mí a . s a n te de la «vida» (¡ en ) que e l dom ina dor y r ey de to do.
Tamb ié n el de Tánt alos " podría pen s ar c ua lq u ie ra Aco nt ec e , pu e s , que es posib lemente ex a c to el no m b re de
q ue e s un no m br e e xa c to y co nfo r m a a la na tu r a leza , s i e s te d ios _por el c ua l. {d i 'h ón] lo s se re s vivos t ie ne n e l b
es ve rdad lo que de é l se c uenta. «vivi r .. (¡en). y aun s ie ndo ún ico s u no m b re , es tá d ividid o
H EItM. -¿ A q ué le re fie re s ? en dos pa r te s, co mo d igo: Día y Z éna. Podria pa rece r in-
Soc . _ A la s m uc ha s y terri bles d e sven tu ras q ue le so-- so le nte , s i se oye de re pe n te , el que se a h ijo de Kro n os y,
b re vini e ron en vida . c uyo co lmo fue la r uina de toda su s in e mba rgo, hay bue na s ra zo ne s para q ue Zeu s (día) sea
e pat ria y, una vez mu er to. la piedra. tan acorde co n su nom- hijo de una g r a n «in te lige nc ia .. {d i án a ia]; pue s Kro no s s igo
b re . _q ue grav ita . {talanteia¡ so b re su c a be za e n el Hade s. n ifíca «lim p ie za .. (k ó ros ); no muchacho , sino la e pu reza e
Senc illamente. pa rece como s i alg uie n hubiera que r ido si n m ezcl a de la «m e nte » (k ó ro s no ü ).
d a rle el nombre de ..e l ma yor sufr ido r» {talá r uato ni ", pe- Este es hijo d e Ou rán os, se gún la trad ició n. y a su ve z,
r o le hubiera nom brado y lla m ado d is im u la da m en te Tán- la con tem pla c ió n de lo alto es tá bien que ten ga el nom bre
talos, e n vez de aque llo. Tal es el no m b re que t a m b ién le de o u ran ía, e la que mira ha ci a lo alto . {ho rósa ta á no). De e
p ro por cionaron los aza r es de la fama. a quí, afi r man los m et eo ról ogos, Herm ógenes , q ue nos vic-
Pare ce q ue t a m bi é n s u padr e , llamado Zeús, tie ne ma- ne u na mente lim pia y q ue el no m bre de l Cie lo es e xa c to.
r avi llosame nte pue sto e l no mbr e , aunque no sea fá cil de Si re cordar a su geneal ogía - todos los pr oge ni to r e s q ue
396a com p re nder. En efecto, el nombr e de leus es como su de- He síodo no m b r a ha ci a a t rás-, no acabaría de e xplica r
fi nici ó n. Lo d ividi mos en dos pa rl es , y un os, emplea mos c uán e xactos so n los nombr es q ue t iene n pu e st os, ha sta
un a y, o t ros , ot ra - u nos le lla m a n Z éna y o t ros D ia- ' \ que pro ba ra c uá l e s la virtud - y s i se va a a got a r o no--
pe ro s i los ay u nta mos e n un o, pone n de m an ifi e st o la na- de est a sa b id u ri a que m e h a sobre ve nido ahor a de r epe n-
te, no sé de dó nde. d
H ERid. - ¡Desde lue go, Só c ra te s ! S e nc ill a me nte pa re-
.. f.n su bio gra lia mí tica ha y tod a su...rt~· d., críme nes: pn ju riu y ro-
ce q ue te has pue s to, de r epente , a re ci ta r o ráculo s co mo
bu a lu s d io su de l n éctar y ..mbros la ; ra pto y pa r r id d io . Sob r...su .,..st i·
gc ...n lo s lnf jera o s. HOIoU.Ro (Od isea XI 582 ss.) 1" a signa un a sed ). ha m- los posesos.
b re cte rn us , p r"OARo (Olimp ica s I 57) lo p re se nta , co mo aq u i Pla tó n, co n S6c . - ¡Cla ro, que es a Eu tifrón Prospa lt io '" a q ui e n
un a pie d ra su spendi d a so bre la ca beza sie mp re a pu n to de ca er. c ulpo, He r mó ge ne s , d e q ue me haya sob re ven ido é sta!
.. . Es co rre<: to rel acio na r el no mb re d e Tá ntal o ron la ra íz 'I,, /(a~ Es
un a red u p lica c ión d e d ich a rol!Z co n d is im ilac ión de /,
.. l a fle xión de Zeú s presenta do s series de form as hec ha s so bre un •• Del de mo"at enien s e de P r6 spa lta. Eu tifrón es un ad ivino d e Ale·
tema Zi n (a n tiguo ac us ode l e'< s) y un tema Di(w)( cf , E . S CHWY I ER , Gríe- na s, c u yo fa n at ismo reli gio so co noc e mos po r el dia logo de s u no mb re.
chische Gramma tik, Mu n ich, 1968 , vo t.L p ágs . 576·77) qu e Sóc ra tes pe- E stas a lus ion es a un a po se sión por p arte de Sóc ra tes . que no dejan de
n e en relació n con e l ver bu t én . vivir . y con la p reposición ca us al dí é, re p eur se (e l. 399 a, 409d), junto con o tra s a lo s so fis ta s y a l mism o Eu t i.
e s d ecir, lo ex plica cu mo causa n te de la vida. Más a bajo r elacion ar á di á frón (39ge, 407e, 409d ), s irve n pa ra rode ar tod a la sección eti mológica
co n di á/'loia elmeligencl.. , ya q u e l eus e s h ijo de Cron o, qu e él explica d e u n c lim a de iro n ía q ue, al menos, nos hac e d udar de la seried ad que
~'o ITI o . pu re/,a. (k 6ros) «de la men te » ( /'1 011). Só cr a tes le co n cede .
388 DIÁLOGOS C R ÁTI LO 389

Pues desde el alba no he dejado de acompañarle y pr va SOc. - ¿No es, enton ces, justo comenzar por los dio-
t a rle oídos . Es posible, por ta nto, no só lo qu e haya col se s y exa minar po r qué ha n rec ibi do exactamente el nom-
mado mis oídos por estar él poseído, sino que in cl u so h1\ brc éste de «dioses» (theoí)?
ya cautivado m i alma. Creo, pues, qu e debe riamos obrtu HERM . - Es r azona ble, al menos.
e así: hoy podemos servirnos de ella y an ali zar los nom bres SOc. - Yo por mi pa rte sospecho, desde luego, algo así:
qu e nos quedan, pero mañana, si cstás de acue r do conmi - me parece que los primeros hom bres que rondaron la Hé -
go, la conjuraremos y nos purificaremos buscando a quien lude tuvie ro n sólo por dioses. precisamente , a los mismos d
3970. sea ca paz de reali zar u na tal purificación , ya sea sac e r. que la m ayo rí a de los bárbaros ticncn toda vía hoy: al so l
dote o sofista. y la luna, a la tierra, a los ast ro s y al cielo . Pues bien, co -
HERM. - Yo estoy de acue rdo. Escucharía con mucho 1Il0 veían siempr e a todos estos en movim iento y «a la ca -
ag rado lo que queda sobre los nombres. ITer a » (Ihéonta), les pusie ro n el nombre de «dioses»
SOco - Entonces habrá que hacerlo. Ahora que nos he- (the oús¡ a partir de la na turaleza ésta de l «co rre r » (th ein).
mos em barcado en un a desc ripción esquemática, ¿por Posteriormente, cuando hubie ron descubierto a todos los
dónde qu ie res que comencemos, en nuestro análisis, pu- demás, siguieron ya llamándoles con este nombre . ¿ T¡e -
ra ve r si los nom bres mismos nos co nfirman que no es tán ne lo que d igo a lguna semejanza con la ver dad o ningu na
puestos espontáneame nte en absolu to, sino que tienen una en absoluto ?
b cierta exactitud? En realidad. los nombres de héroes y HERM. - [Cla ro que tienc mucha!
homb res podrían llevarnos a engaño: muchos de ellos han SOc o- ¿ Entonces qué podríamos examinar después de
sido pu estos confor me al apelat ivo de sus antepasado s, es to ?
aunque no les convini era a a lgunos , como decíamos al co- HERM. - Es evide nte que a los d émones, a los héroe s e
m ienzo; y otros m uchos se ponen e xpre sando un deseo, y a los hombres .
como Eutychides, Sosias y Theóphilos" y muchos más, SÓC . " - ¿A los d émones? ¿Y qué querrá d ecir do ver -
Así pues, es mi op in ión que habría que dejar tales n om - dad, H e rmógenes, el nombre de dómones ? Considera si
bres . Sin embargo, es razonable qu e encont remos los que te p arece que llevo razón .
es tán rec ta m ente puest os, sob re todo e n relación con las HERM . - Sólo t ie nes que hablar.
realidades eternas por natu raleza. Aqu í es donde convie- SÓC. - Bien. ¿S ab es qu iénes dice Hesíodo que son los
ne, m ás que nada. inte resarse po r la im posici ón de los dé m o nos ?
e nomb res . Puede que a lgun os de ellos ha ya n sido p uest os HERM . - No se me ocurre.
por una potencia más divina que humana " .
H ERM . - Creo qu e d ices b ien, Sócrates.
. " E l tex to e s p rob lem ático en lo qu e loca a la at ri bu ción a los pcr-
so na je s de la h-ase de/o" de.., dah"'m~s. No s apartamos aq uí de Bumcr,
que su p r ime s in motiv o sei s pa lab ra s. Mé r id ler sigue a Heindorl, e l c ual
opta por la lectu ra e de/on de (W) y a signa la Frase a Sócrates co n mt e-
., Etu ychides es _Bu ena ven tu ra . : S ósias. eHicn librado» , y Theo - r rogactón. Nosot ros seg ui mos la lec tura de BI atribuyendo (con Bckke r,
phi/o s. 'Prolegido de los d ioses • . que si gue aqul a Stcphcnus) la fras e a Hermógenes, exce pto el segu ndo
.. Esta ex p licaci ón. qu e in tr oduce aqu í Sócrates como una pos ibi. dalmol1fJs, que se pone en boca de Sócrates C(H1 sign o de in lerrogación .
lid a d, la re~ haLa a b ier tam ente en 425d co mo una evas iva , E n c ua lq uie r caso, el sent ido no cambia s us ta ncia lme n te.
390 D IAlOGOS CRÁTIL O 39 1

SOl;, - ¿No dice que la p ri mera gen e ra ción de hom b re s Ih:}l.M. _ Creo, Sóc rates, que ta m b i én yo es toy p lena-
fue de o ro ? urente de ac ue r do con tigo en es to. Pero, ¿y hé r oe? ¿Que
HIóRM. - Eso s í q ue lo sé. se ria ?
Soc. - Pues bie n, sobre es to di ce: Soc. - Estu no es muy dificil de imagi nar , pue s su
luego que Mo íra ocultó por completo a esta raza, nom bre está poco a lterado y s igni fica la gé nesi s del a mo r.
HE RM. - ¿ A qué te refie res?
398a reci ben el nom bre de d émones. pu ros, terrenos,
nobles, protect ores del mal. gua rd ianes de los hombres soc. _ ¿ No sa bes qu e los hé ro es so n se m idi oses ? IZ .
(m ortales ~ HERM. - ¿ y qu é ?
SOC. _ Todos, sin duda, han nacido del a mo r de un d ios d
H SRM. - Bi en. iY qué ? po r un a mort al o de un mo r ta l por una d iosa. Conqu e , s i
SOC. - Pues que piens o yo que Hesíodo llama . de oros obse rvas ta m bié n esto en la le ngua á tica a rcaica '-l. 10 sa-
a esta raza, no po rque naciera del oro, sino po rqu e nació brá s mejor: te pondrá de manifie s to que, en lo que toca
«no ble y he r mosa ». Y la p r ueba es , pa ra mi , que también a l nombre, es tá mu y poco desviado del nomb re del - a mo r»
afirma qu e no sotros somos un a raza d e h ierro . (érosA del cual na cieron los héroes (h i r()esA Esto es 10que
H t:RM. - Dice s verdad. define a los hé roes, o bien el que eran sa bios y háb iles ora-
Soc . - Entonces, s i a lgu ien de hoy es bueno. ¿ pie ns as dores y d ia léc ticos, capac es de «pregu nta re (ero tan). pues
b que Hes íodo diria que pert enece a aq uella raza de oro ? etreí n es s inó ni mo de íegein (ha bla r). Asi pues, como de -
H E RM. - Es m uy pro ba b le. ciamos hace un inst ante , los que, en la lengua á tic a, reci -
Soc . - ¿ y los buenos son ot ra cosa qu e se nsatos? ben el no m bre de héroe s aparecen como o rado res)' há bi-
B ERM . - Sensatos. les interrogadores; de mod o que la raza he roica es raza e
Soc . - Po r consiguiente, se gún mi op in ión , lo que de- de orado res y sofis tas. Es te caso no es difícil de com pren-
fine a los d émon es es esto má s que nada; y, como e ra n sen- der, sino, más bien , el de los hom bres. ¿ Por qué reciben
sa tos y «sa bios .. (dal mones). les d io el nom bre de d érno- és tos el nom b re de ánth r óp oi (homb res)? ¿ Puedes tú
nes. Y, de sde lu ego, e n nu es tra lengua arcaica a parece este decirlo ?
mi s mo num b re ". Conque d ice bien este po et a, así como HERM. - ¿ y de dónd e, am igo mio. va y a pod e r yo? Y
cuan tos a fi rma n que , c ua ndo fall ece un hombre buen o, a u nque fue ra ca paz de descub ri rl o , no me esforza r é po r
con s igue un gra n destino y honra y se convier te en de mon considera r te más ca paz que yo de descubrirlo.
e e n vir tu d del nombre que le im pone su p r udenc ia. Asi es , Soc. - Tú con fía s e n la inspir ación de Euti frón , segun J99a
pu es, como yo ta m b ién sos te ngo que todo homb re q ue sea parece.
bueno es dem ónícc, ta nt u en vida corno m ue rt o, y que re- lI ERM. - [Cla ro!
ci be ju s ta men te el nom bre de de mon.
l<J CL Trabaiu5 y Dia5, t 21·3. Los MS S. ofrecen gata en lugar de Sl 5610 e n Hes íodo. En Ho rne ro la p a labra se a plica a je les )' reyes.
Morra . a s! co r no a per so najes de su e ntorno (po r eje mplo, a l aedo De mód uc o).
l ' la pal a bra uatmo" pe rtenece, efec tiva mente. a la len gu a é p ica. JU ros eSlá e n relació n con la ra íz ide, ' s"'J!' ' protege r . , de do nde prcce-
La elilllulogla , ~ i n e mba rgo, es errónea. Cualq uiera que sea su sen lid o d..· también el nomb re de la diosa ll era y de Her ac lc s.
ot'igjnar!u, <I~Ú'/{}11 c~ t ~ , m ás bic n, en relac ión con la miz ,k'l Y"l'bu <1<1111.\" )) En el a lfabeto s uc o arca ico, el signo e se n' la para n-es fon em a s:
>I1l1i <n 'pu l'li"•. e, ~ y ~ .
392 D IÁ LO GOS CRÁTI LO 393

Sóc. - y confJas b ien. Aho r a, cier ta mente, me pa rece I-IE RM. - ¿ Entonces qué ? ¿T e pregunto lo qu e s igu e a
que me viene n a la m en te id ea s inge nio sa s y correr é el r ies- est o, cosa que escuc ha rí a con gus to ?
go , s i no me a ndo con c u idado. de resu ltar hoy aú n más SOC. - Desde luego.
lisio de lo convenien te. Flja le lo que te di go: esto es lo pri- H E RM. - Pu es b ien, ta l como yo im a gino , a esto le sl- d
me ro qu e ha y qu e refle xiona r sobre los no m bres, el que KlIC a continua ci ón un asu nt o: s in duda al hom bre le at ri -
m uc ha s veces añad imos let ras. ot ras las s up rimimos huim os a lgo a lo que llama mos a lma y c ue rpo.
- po r da r no mb res a pa rt ir de lo que que re mos v-, y S6c. - ¿Có mo no ?
ta m bién ca m biamos los ace ntos. Po r eje m p lo, Di! phílos HERM. - In t ente mos, entonces, diluc idar es to como lo
b (p ro tegi do de l e us): pa ra qu e, en ve z de loc ución u. se »ute r tor.
nos con vie r ta e n nom bre le qui ta mos un a i y p ron uncia- 5 6c. - ¿Qu ie res deci r que a na licemos has ta qu é pu n-
mos como grave, en vez de aguda . la sílab a central !oto, En l o es razona ble el no mbre de psycht y de spués, igualrnen-
otros nombres. por el cont ra r io, in troducimos let ras y pro- re. el de soma?
n unc ia mos como agudas las síla bas g raves. HERM . - SI.
H ERM. - Dices verdad . SOc. - Buen o, para de cirlo al mo mento. creo que los
Soc . - Pues bien, en tre los nom bres que expe ri me n- que pu si e ron el no m bre de psych é (a lma) pe nsa ban algo
tan esto. un o es, precisamente, el de ánth rópos, según me ust: que, cuando acom paña a l cuerpo, es ca us an te de que
parece. Pues de locución se ha convert ido en nomb re con és te viva , puesto que le p roporciona la capacidad de re s- ~
s uprim ir una sola let ra, la a, y conver tir en gra ve la úhima. pir ar y de • refre scar . (a napsychó tl)~ , y que el c uerpo pe-
H ERM . -¿ Cómo? rec e y m uere t a n p ronto como le abandona lo que refres-
e Soc . - De es ta forma; es te nombre d e án th rop os sigo ca. De ahí, p recisa mente, me pa rece que le d iero n el no m-
nifica que lo s de más an ima les no obse r van ni refl exion a n b re de psy ch é. Pe ro ten pacienci a , s i qu ieres, po rque me
ni «e xa mina n - tanath re í) na da de lo que ven; e n ca mb io pa rece que estoy vis lumbrando u na ex p licación má s co n-
el hom bre, a l t ie m po q ue ve - y esto sig n ifica ópo pe-, vince nte qu e ésta a lo s ojos de los a migos de Euti fró n 1'.
tam bié n examina y razona sob re todo lo que ha visto. De Me ima gino que és tos la despreci aría n y la est imaría n gro- 40&
aq ui q ue só lo el hombre, e nt re los a nimale s, ha rec ib ido se ra. Conq ue mi ra si es ta otra te satis face tam bié n a t i.
correc t a me nt e e l no m bre de ár uh r ópos po rque «e xa mi na HERM. - Só lo tienes que ha blar.
lo que ha vis to . {ana th rón ha ópope). SOC. - ¿Qué otra cosa, sino el a lma, pien sas tu qu e por-
ta y sopo rt a la na tural eza de todo c uerpo , a fi n de que vi-
va y so bre viva ?
~ Cf. n. 3 1. En ge ne ra l, Sócra tes al ri bu ye e l cam bio a l aUn d e em · H ERM. - Ning una o t ra cosa.
bel lecim ien to. Aqu l a lu de a n uest ra volun tad de fonnar nomb re s d e lo
qu e no s inte re sa .
!} R n éma, en Platón, sign ifica la n lo «ve r bo >, como elocución » O 11 Esta e limo logla , po sib lemen te correcta. es la mi sm a q ue o frece
• sin ta gm a ». ya sea n om ina l (el. D{philos) o p redicativo (el. la enmolc gfa AK IST ÓTELf.S e n De A01ima 40 5b 28 ss .
d e án lhró pos má s ab ajo). SI CL n . 46. Parec e qu e Sóc rates a tr ib uye a Eut ifrón alguna activ i·
,. Es de ci r, Dil ph i/o s Se <;o l1 Vie rle e n Diph ilos su p rim iend o un a i y d ad en elter re no et imológico (d. S TElN f\K, . Die El ym ulogie n in Plato n s
h"c'il'Jldu g ra ve (l. f ., flIUJl" ) 1,. s fla ba phi. Pe ro, auemás, y e s to SÚlTlItes Kralylo s. , A rc'h iv ¡. Gesc h. der Phi/os. 22 [19 16],1 25), pero no te ne mos
no lo dic e, ha ciendo a gud a en vn d e gra ve la p r im era i. má s p r u eb as en es te se n li do.
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394 DIÁLOGOS CRÁT ILO 395

Soc . - ¿ Y qu e? ¿No piensas t ú C OIl Ana xágo ras )' que del a lma, ta l como se le nombra, mien tras ésta e xp ía su s
la m ent e y el a lm a es lo que orden a y mantiene la nat ura- c u lpas; y no ha y que ca m bia r ni u na letra ,
le za de todas la s dem ás cosas? HERM. _ Creo, Sócrates, que esto se ha dejado s uñ c ten- d
b H E RM. - Sí. te me nte fo r mu lado. Pero, ¿y so bre los nom bres de los d io-
Soc . - Entonces se r lo. correcto dar e l no mb r e de ses, ta l como ha ce u n inst ante ha bla ba s de leus ? ¿ Podría-
physécht a es ta pote ncia qu e .. porta s (ocheí) y «so po rta .. mos exa mina r, por el m ismo p rocedimie nto, e n virtud de
(éche i) la «na t u ralezas (physis~ Aunque tamb ién es po sl- qu é e xactit ud tie nen puestos sus no m br es z -' .
ble lla ma rla psychl no s in elegan cia. SOC. - jPo r leu s, Hermógenes! Si fuéra mo s sens atos ,
HERM . - Ex ac ta me nte. Y. a demás, m e parece q ue es- si que ten dríamos un p rocedi mien to , el mejor: qu e nada
ta denomi na ción es más científica q ue aquélla. sa be mos sobre los d ioses ni sobre los no mbres que se dan
Soc . - y lo es. Con todo, parece rea lmente r idículo a s i mi smos - pues es e vidente que e llo s se da n los ve rde-
da rl e el no mbre 10.1 como se le pu so . deros nombres- oPe ro una segu nda fo rma de exac ti tud
HERM . - ¿ Y lo que s igu e a es to ? ¿ Có m o direm os q ue se r ía lla marles, como acos tum bra mos e n las ple garia s, ~
es? «cua lq uiera sea la forma como gu sten de ser nombrados >,
Soc . - ¿Te re fie res al «c u e r po .. (so m a)? pues ni ng una ot ra cosa sabemos . Y pi en so yo, desde lu e-
HUM . - S í. go, que es u na b uena costumbre. Ahora bie n, si lo de seas, 40la
e Soc. - Est e. desd e luego, me parece co mpl icado; y mu- e xamine mos previniendo, por así de ci rl o, a los dioses que
c ho. a u nq ue se le varíe poco. En efect o, h ay quienes dí- no vamos a indagar nada sob re ellos mi sm os (pues no nos
ce n que es la «tum ba .. (sema) del alm a 011. como si és ta es- cons ide ra mos d ignos de ello), sino sobre los hombre s: c uá l
tuvie ra e nte r rada en la ac tua lidad. Y, dado q ue, a su vez, era la opi nión que tenían cu ando le s pusie ro n no m bres.
el alma man ifiesta Jo que ma nifiest a a través de és te. tamo Es to es ca pará a s u cólera.
bié n se la lla ma jus tamente «s igno .. {s éma): H ERM. - Par éceme, Sócrates, qu e hablas co medida-
Sin emba rgo . c reo q ue fue ro n Orfeo y los suyos qu ie- men te. Conque obre mos as í.
nes pus ie ro n es te nom bre, sob re todo en la idea de que soc. _ ¿ y qué otra co sa h arem os, s ino comenzar por b
el alma ex pía la s c u lpas que ex pía y de q ue t ie ne a l c uer- Hest ia, co mo e s no r ma . I?
po como recinto en e l que e resgu arda rs e - (só i zel a i) ·' bao HIóRM. - Es jus to, de sde lu ego.
jo la fo rma de p r isión . As í pues, és te es el soma (p r isión) SOC. - ¿Qué se d iría qu e pensa ba e l que le d io e l no m-
b re de Hestía ?
II ERM. - Po r z eu s. no c reo que e sto sea fác il
Yo Anaxágoras ide n litic a d al ma co n la - me me , (n u u s) (d. ARISTó. Soc. _ Es bien pos ible, bue n H ermógenes, q ue los p ri-
n :a.s. De A "il?la 404a) y ha ce d e és ta e l p ri nc ip io o rde nado r (dl a ko5I?ld "
es la pa la b ra q ue e m plea , p recls am en te, AnaJtágoras) y s ustenla do r del
me ro s qu e ím pu si e ro n n om bres " no fue ra n necio s. s ino
Universo . astrónomos y gárru los hab ladores.
.., Es u na id ea pita górica q ue aparece en FtLOLAO, 8 14 (cf., tam bién, 01 En toda e sta serie ya no se alude al pr inc ipiu de nominación po r
Corgía s 493a). e l género, d. n. 30.
• , Eti mologja co rr ect a, aunq ue erróneamente ex plic a da. Sóma es· 01 Tod os lo s sacrifici os comenzaban por Hes lia. diosa del hoga r.
tá ell rela ción co n el verbu 5" IZ" y, origmarlamcnte, parece que sign ilica " Aquí Sóc rates a lude a u na co lec ti vida d (el. n. 17). La e ~ p fes io l1
<ca dá ve r. , 1, e., . 10 que se reco bra - después d", un com bate. . lo s p rimeros _ ha ind ucid o a alg uno s er ud itos a consi de rar err ónea me nle
. .... _- - - - - -- - - - - - - - - - ...
396 DIAL OGOS CRÁTI LO 397

H ERM. - ¿ Cómo? ~ .. r . (urh oult) "" de donde es razona b le que la lla ma ra n


Soc . - Me pa rece que la im p os ició n d e n o m b res t'~ nsia. Que de es to así se ntado como ¡x>r qu ie nes nada sa be n. e
e obra de tal cl ase de ho mbres. y si se ana liza n los nombres Despu és de He sl ia es razona b le an a liza r R h éa y K ró-
de o tros d ial ec tos ", no se dejará de de sc ub r ir lo qu e siy ' W.~.Cla ro, q ue ya he mos desc rito el nom b re de Krono s.
n ifica cada uno. Po r ej e m plo, a lo que nosotros lla ma mos a unq ue qu izá nada va le lo que d igo.
ousía (s er, ese ncia), u nos lo lla man essta y ot ros incl uso H F.RM. - ¿Cómo es eso, Sóc ra tes ?
Osío" , As í pu es, es razona b le llama r Hesua . confor me a SOC o_ Buen a m igo, se me ha oc urrido un como en-
la segunda de nom inación, al ese r (ese ncia).. de la s cosas. ja m b re de s u rile aas.
Pero, ade más. dado que nosotros decimos estin (e s) " de H ERM. - ¿ De qué cl ase ?
c ua nto pa rt ici pa de la ausia , ta m bi én po r es to se r ía co- SOC. _ Es com ple ta me nte r idícu lo dec id o , pe ro c reo 4020
r rec to el nom bre de Hestia. Pues incl uso no so tro s a nt igua- qu e t ie ne u na ci e r ta fue rza de pe rs uas ión .
me n te, según parece, llamá bamos essia a la ous ía. Aún H E RM. - ¿Que fuerza es esa ?
d má s: si uno se fija e n los sac r ificios. pe nsa r ía qu e los que Scc. _ Me parece ve r a He rácl ito d ici endo cosas sao
le pus ieron el nom bre tenían est a idea : es razonable que hias y a nejas. s im plement e de los tie m po s de Rea y Cro-
co miencen con He sita el sacrificio precisamente aquell os no s; las m ismas qu e Home ro decía .
qu e d ieron e l nombre d e ess ta al se r del Unive rso. Cuan- H ER t04 . -¿ A qu e te refieres con es to ?
tos, a su vez, la lla ma ron ósia pen sar-ían, casi de acuerdo SOC . - En algún s it io d ice He rácli t o e todo se mueve
con He rácl it o, que los se res se m ueven todos y qu e nad a y na da perrnanecee y, com pa rand o los se res co n la corrien-
pe r ma nece. la ca usa y el princip io de estos es el - Impul- te de un río, a ñade: «no podr ías sumergirt e do s veces en
el m ismo rt c - .
H ERM. - Eso es.
este d ilo logo como u na in da gac jon sobre el o rig e n de l lenguaje (d. nu es- Soc. _ ¿ Pues que? ¿ Pien sas que qu ien puso el nombre b
Ir.. I ntro d .).
'"" En gr . xe ..iJe A tm ÓI't/IJ/IJ. Con .Unl Je os, Pla tón -.e refie re s ie mpre a de R héa y K r ónos a los p rogen itores de los de más d ioses
otros d ia lec los d isli n lOs de! a nco. Pa ra la s lenguas e xtra nje ras e mp lea pe nsa ba algo d is tin to qu e Her ácltto " ? ¿ Acaso c rees que
e! a djeti vo bdrbIJros. aq ué l les impuso a a m bo s nom bres de corrie ntes al aza r ?
.. No hay 0 1..... l" stimon io q ue éste so brelas te rm e s essílJ y (jsilJ. En Igua l qu e Home ro di ce a su vez: «Oc éa no de los d ioses Pe-
e! p ri mer ca so {e ssilJ~ puede llev ar ralón Pla ló n . dado q ue e l sus cannvc
se fo rma sob re e! pa rti cipio fe me n ino del verbo ú m í: la fo r ma isslJ apa-
d re y madre Teti s e "'. Y c reo qu e t a m bi én Hesiodo 'l . Di-
rece e n e-oho. as í co me en do r io d e Ep ida uro y T recén (el. C. D. B ucx , ce , igua lmen te, Orfeo:
The <iruk LJilJ/uls. Ch ica go . 1'>155, pá g. 12'>1l. Yla IOI-ma iHOi. en Fuo i so.
B6. La fo r ma " slo. s in emb argo, ni eslá tes tificada ni tie ne jusl ific ac ió n "" Aqll l. Sócrates rela cio na in le re sad a me nle osllJ co n el ve r bo ó lhi ó
mo r fo lógica a lgu n a, pu e s el resto de los d ial ec to s fo r ma n s u pa r tic ipio «im p ulsa r •. p reci sa me nte pa ra e sta b lece r la lil o so ll a d e He r áclito como
feme n ino so b re e l a tem. e n /· (a meno s qu e Pla tó n esté pensa ndo e n el beo- punte de p a.-tidadel no mina dor a l pon c .- lo s no mbre s. Es t a se va ín tro-
ciu i" su, re sultad o fonét ico de ' t (Jnliu (e l'. e. SCHWYZER, Grieehisch e Gram . ducte ndo s utilm en te ha st a ponerla en la ba se d e to da s la s explice cton es
mali k, an l. cit. , vol. 1, pá g. 678). En los f ra gment os d e los p .-esoc .-á tico s etimológicas . es pe cia lmen te, de las noc ion es filos óf icas y mo ra les en ellb-
de d ial ecto d or io, re cogido s por H . Dieh, a parece sie mp re (J usiu, fo r ma c [cf. nue st ra Inl r(JdJ
consagrada en e l léxi co Itlosól tco. •• En 396b se exp hc aba de o tra ma nera . Aq ui , aunqu e no ex presa -
61 E S / úl po r hes /ian tic los MSS ., es u na e onj ~ t u ra b rill ante de Bu r- mente, lo pon e e n rela ción co n k rounos «fu en te •.
net , a poyada por e l es p ír il u s u a ve co n q ue a pa re ce la palab.-a en B y W. lU JII~da XIV 20 1.
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C RÁ T I L O
398 DIÁl OGOS

nació n de la «r iq ueza " (p ta C/lo s), dado q ue la r ique za sa le


Océa no de herm osa cor riente fue el primero en casa rse,
de debajo de la t ie r r a. En c ua nt o a l de Haides, la mayo r ia
e el cu al a su herm ana de mad re, Tetis, desp osó.
parec e su po ne r que añade a este no m bre su ca r ác te r de
Fíja te q ue e s to co ncue r da y todo co nfluye e n e l d icho de invis ib le (aeidés) 11 y le llama n Plo út ón por te mo r.
He rá cl ito. H Ek M. - ¿ y a ti qué t e par ec e , Sócrat es ? b
HERM. - Creo, Sóc ra tes, qu e dices a lgo de va lo r . Sin S oc . - A m í, de sde luego, me pa rec e que lo s ho m b re s
em bar go, no com prendo lo que s ign ifica e l nom bre de se eq ui vocan de cabo a r abo so bre la vi rtud de es te d ios
Te thYs. y que le t iene n miedo sin r azón . Y e s q ue temen q ue, cua n-
S{)C, - Pu es e n verdad d ice por si mismo qu e es nom - do muere uno dc nosotros, pe rmanec e allí pa ra s iem p re .
b re vel a do de fue nte. Pu e s lo «ta m iza d o . {diatt ám enoni Ta mb ién a lbe r gan e l temor de que e l al m a , de spoja da d e l
d y ..fi ltra d o » (et h o ú m eno nj es im a ge n de fuente, y de e s tos cue r po. vaya a ~ rar jun to a aq uél. Pero e s mi opini ó n
d os nombres se co m pone el de TllhYs. que todo co nflu j e ~n lo m ism o. ta n to e l pode r de l d ios c o-
H ERM . - Es to . Sócra tes, si qu e es s u ti l. mo del ho mbre.
Soc . - ¿ y por q ué no ib a a se rlo? Ma s, ¿qué va de t rás H ERM. - ¿ Cómo, pues ?
de e sto ? Ya no s he m os ref erido a Zeus. S oc . - Voy a deci rt e lo que a mi se me antoja. Dim e: e
H ERM . - Sí. de las t r aba s que r etienen a u n vivi ent e c ualquiera en un
S oc . - Ha ble mos . pue s, de sus her manos Po se id ón y lug a r c ual q uie ra , ¿cuá l te parece que es m á s fu ert e, la ne -
Plutón y de l no m bre q ue le dan a és te. cesida d o e l deseo ?
H E RM . - Desde lu ego . H ERM . _ Es superio r con muc ho e l deseo, Sócrate s.
SOC. - Pue s bien , me pa re ce q ue e l no m bre de soc. - ¿ No p iensas, e ntonces , q ue m uchos h u iría n de
e Poseid ón 11 fu e pue sto po r e l p rim e ro q ue le nomb ró , po r- Hade s. s i é st e no re tuvie r a a los q ue va n allí co n la tra ba
que la na tu raleza del m a r co nt uvo s u m a rcha y no perm i- más pode rosa?
t ió que con t in uara av a nzando: fue pa ra él co m o una t r a- HIlRM . - Claro .
ba d c s us pie s. Conq ue a l dios q ue te nía el d o m in io de es- soc. - Luego , se gún pa rec e , lo s e nca de na con el de- d
t a ca pacida d le d io el nomb re de Po sei d ón como s i fu e ra se o -y no con la nece si dad-e, s i e s que los encadena co n
..t raba para los p ie s .. (p osi des m ón): Y la e se introdujo, la m ayo r t r aba.
q ui zás. po r realza rlo. Puede que no q u ie ra decir e sto, si - H E RM . - Así pa re ce.
4030 no que , en pr incipio se p ro n u ncia ron dos 1 en vez de la S óc. - ¿ y no so n n um e roso s los de seos ?
s, con e l sent ido de el «d ios que s abe m uc ho - (polla e idó s): H ER M . - Sí.
o quizás ha re c ibido e l no mbre de «e l que sa c ude» (ha Sóc. - ¿ y ha y un de seo m ay o r q u e cu a ndo u no conv]-
seíon) a pa r tir de l ve r bo seíein (sa cudi r) a ñadiendo la p y ve c o n a lg uie n y e s pe r a co nve r t irse en un ho m b re m ejo r
la d. En c ua n to a l de Pío úton. fue llam a do a s r por s u do- po r cau sa de é s te ?
H ERM . - [Por z cu s. S ócra te s. de ni ng una m a nera!
JI No e s cie rto . En Hes sod o los d Kue t p rocede n de Ga i.a y Ura no.
71 La et imo logla co rrec ta d e Pose idó n parece su «es poso- (gr. pó-
H És ta es . prec isa mente , la e t imo lo gla co rrecta. Ta mb ién lo es o b-
sis) o . d omin a do r . [id e, · po/ ·) de la . tierr llO (da). (el'. ScH " CH Ea M I':U , Po·
seidon, Bern a. 1950 .) via ment e la qu e se da d e Plutón.
400 DIÁL OGOS CRÁTILO 40 1

SOco- Direm os entonces , Hermógenes. que n adie de HITa n es alguien • deseable. (eratt). tal como se cuen-
los de allí de sea regresa r acá po r est a razón , ni s iquie ra t a qu e leus la po seyó, «deseándola» (erasthe ts): Qu izás, el e
las S ir enas ", sino q ue tanto ésta s co mo todos los dem ás le gi slador. invest igando los fenómenos cel es tes , dio el
e están hec hiza do s. ¡Tan he r mo sos son, segú n parece, los no m bre d e H éra al - a tre» (a~ r) velada m ente, po niendo el
rel atos q ue sa be co nta r Ha des! Y de ac ue r do. a l menos, in ici o del nombre a l final. Lo captarlas s i p ronuncias m u-
con este razona mi e nto, este d ios es un cum plido sofis ta c has veces el no m b re de He ra .
y un gr an bienhec ho r de q uienes con é l están. ¡Él, qu e ta n. En cua nto a Pherréphatta '1, muchos sienten temor de
tos bienes envía a los de a q uí: tan numerosos so n los que este nombre, así como del de Ap óllón, po r igno r a ncia de
le so bran a llí! Conq ue, en razó n de es to, re ci bió el nom- la exactit ud de los nomb res, según parece. As! que lo tra ns-
bre de r toaio« Al mismo tiempo, el no desear co nvivir forman y lo co n te mplan com o Phe rseph óne, y les p a r ece
404a con los hombres m ientras tie ne n c ue r po; el convivir c ua n. te rrible. Ma s éste s ignifica q ue la d iosa es sabia, pues da- d
do e l a lma se hall a pu ri ficada de todos los ma les y a pe t i- do qu e la s cosas se mueve n, lo q ue la s toc a , la s palp a y
tos del c ue r po ¿ no te pare ce q ue es propio de un filó sofo puede acom pañarl as se d a sa bid u rí a. Asi pue s, la diosa se-
y de quien tiene bien pe nsado que, de es ta forma . podrá ri a lla m ada con exa c ti tu d Pherépapha. e n virtud de su sa-
retene r los enca denándolos con e l deseo de virtu d, pe ro bidurla y su «co nta c to co n lo que se mueve . (epaphén l OU
que, mient ra s te ng as e l a turdimi ento y locura del c ue ro pherom énou) o a lgo por el es tilo (razón por la cua l convi-
po , ni s iq uiera Cro nos . su padre, pod r ia r e tenerlo s a t én- ve con ella Hades, que es sa bi o). Sin emba r go, ahora alte-
do los con la s liga d u ras 1~ qu e le at r ibuye la le yen da ? ran su nombre teniendo en más la eufonía q ue la ve rd ad ,
H ERM. - Es po s ib le q ue d igas a lgo se ri o, Sóc rates. de fo r ma q ue la llaman Ph erréphatta. Igua lm ente. como e
b. Soc. - Co nq ue e l no m b r e de H áid és, He r móge nes, no d igo, muchos s ie nte n te mor de Apó1l6n, como si sug ir ie-
lo ha recibido, ni m uc ho m enos, a pa r tir de lo «invis ible . ra a lgo te r ri ble. ¿ No te has per ca t a do ?
{aidoús}: Ant es bi en, po r e l hecho de «co nocer » {eidena i¡ HE.RM . - Desde luego que si. Dices ve rdad.
to do lo bello, fue llama do H áid és por e l leg is la dor. SOCo - Y, sin em bargo, se gún mi opin ión, es te no m bre
HERM. - Bie n. ¿ Y de Dem éte r y Her a , Apolo y Aten ea, está excele nte mente puesto en lo qu e toca a la virtud del
Hefes to y Ar es y los demás di oses qu é d ir emo s ? dios 19.
Soc. - Pa rec e que Dem ét er ,. recibió t al no m bre e n
n Sobre la aUlén tiCll e limo lo gfa de He ra , d . n. 52. El truco d e re-
virt ud del do n de l a limento, pu es nos lo - da - (didoúsa) co- pe tir va ria s veces el nombre de Hera para ca pt a r el so n ido..zr dem ue lo
m o • madre . (m ¿Ur). Ira qu e el á líco. si n o ps il6ti co. el1l un dialect o de a s piració n m uy debili·
ta da. (Cf. Buce , r he Gru k...• p ágs. 53-54.)
71 El nombre de Pe rséfc ne a parece b ajo la s sig uientes form a s: am
1. Se nata d e un a colec uvid ad mí lica. po~ i blcmeme d e o rige n ClÓ- a s pira ció n d el primer térm ino d el wmp ue 5lo Pe~eph ónf'ia. co mún e n
n ico , a unq ue la Epope ya la s con ~' i n iera en ca n lo ras mari na s. Son com o tlitlda y Odíse tl, y PersiphasJa e n ElóQulw (Coc!foras "'90); co n dob le as p i-
pa ile ra.. de Peu d o ne y so lían figu ra r en la s tu mb as. rac ión Phen ephimt . oom lÍn en la linea; Phe n tphatla, en AIUSTÓf~" I!S (TeJ­
" Cro nns., pad re de Ha des, Po..eidón y Zeu s. fue destronado por este mofar. 287 y R a nas 67 1), y Pher,iphtllla en in sc ripc ione s :lo tkas (/. G. 21
último y encad en ad o e n el Tártaro. 1"'37). Esta ú lt ima es , por ta n to, la fo rm a corrie nte e n :lo tíeo no litera rio .
' . Esta etimología es co rrec ta sola me n te a medías. La au l~n tic a pa- El seg u ndo elemento de l co m pue sto (·phólli) liu gie re la id ea de mue rte
rece se r da (tie rr a) méter (madre) (d . U . v. W I l ~ " OWIT Z . De! Glau be de! vio le n ta (phó nos). de ah l que a la ge nte le pa rezca una d iosa terrible.
Ii clle"c n, vo l. l. pá g. 212). 79 Cf. 405e y n . La et imologla de Apolo e s muy d iscutida [cf U. v.
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402 DIÁLOGOS C RÁTILO 403

HU M. - ¿Cómo, pues ? (ho moa pó lesis), ta nto a lr ededor de l c ie lo - lo que lla man
Sóc. - Inte ntar é ex plica rte lo q ue a m í me parece. No " re vo luci o ne s » (póloiJ-, como e n torno a la ha rmonia de l
405u ha y no m bre q ue se h u biera aju stado m ejo r. sie ndo ún ico, ca n to, la cua l recibe e l nombre de consonancia, porq ue d
a la s c ua tr o virt ud e s del dios , ha s ta el pun to de que a ba r- to das estas gira n a l m ismo ti e m po de ac uer do con una
c a to das ell a s y mani fie sta, de algún modo, s u a r te de mú - cie rt a armonía , com o afirman los entendidos e n m úsica
sico. a d ivino. méd ico y a rq ue ro. y ast rono mía.
H ERM . - Habla. pue s. ¡Ext ra ño no m bre e l q ue me e s te e s e l di os q ue preside la armanla , s im ultane ando
di ce s! tod a s estas e rotac ione s s (homopol6n) ta nto ent re los d io-
. Soc. - y bien a r m ón ico , desde luego - ¡como que el se s com o e nt re los homb re s. Y e s q ue, lo m ismo que a ho-
d ios es mú sico ! En primer lugar. la purificación y las abl u- rnok éleuthon (co m pa ñe ro de viaje) y ho m ókoit is (ce n sor-
cione s lanto e n lo que toc a a la medicina c o mo a la m énrí- le) le s hem o s da do el no mbre de akólou thos y ák oitis ca m-
b ca, as¡ co mo las fum iga cione s c on drogas me dicinales o bia ndo homo- por a-, así hemos llamado Apóllón a l que e ra
m án tica s, y. fin almente, lo s ba ños y aspe r s io nes e n tales Hom op ólón.. introduciendo otra 1 porque e r a homónimo e
ci rc unstancias. tod as ellas te ndr ía n una so la virtud: de- de la palabra mole st a .' . Cosa que, inclu so ho y, sospe-
jar a l ho mbre puro tanto de c ue rpo co mo de alma. ¿O no ? c han a lgunos por no exa m ina r con prec isi ón la vi rtu d del
H EkM. - De sde lu ego. no mbre. y lo lemen c o mo s i tuviera el si gnific ad o de des -
SOC. - ¿ Por c onsigu ien te , és te sería el dios que pur-i- trucció n. Y, sin embargo, este nombre, como decíamos ha-
fica, a s! como e l que lav a y libra de tales males ? ce un instante. fu e impuesto porque a barca tod as la s vi r o406a
HUM . - Desd e lu e go. tudes del d ios: «sincer o » (haploús), «cons ta nte di sparador»
SOCo- Entonc es, e n virtud de la s liberaciones y ablu- (aei bállónJ, «pu r ific a do r» (apoloúón), rector de la e co-
ci o nes -e n la m edida en q ue es médico de tal e s male s-, r otac ió n » (ho mopoloun~
e r ecibirla con propiedad e l no m bre de Apolo úón (el q ue la- En c uanto a las Mu sas y, en ge neral, a la mú sic a , les
va ). Y, e n virtud de la adivinación, la verdad y la s ince r i- dio es te no m bre , segun pa rece. a partir del ve rbo «desea r »
dad - pues son la mi sma co sa - , recibiría con toda pro- (m ós thai}Il, a sl co mo de la inve st iga ció n y e l amor por e l
piedad e l no m b re que le dan lo s te sa lio s; pue s t od os e llos s a ber. .
llama n Aplóun a e ste dios . Y, en r a zón de s u dom inio del LitÓ viene d e la benevole ncia de esta d io sa , por c uan-
a rco, po r es ta r s iem p re d is pa ra ndo, es aei b állon (cons- to accede g ustosamente a lo q ue uno pueda ped irle. Pero,
ta nte di sparador). En lo que se refiere a la m ús ica , hay ta l ve z, se a como la lla ma n en otros di a lectos - pues m u-
q ue toma r en cons ide ra c ión -co mo en el caso de ak álout- c hos la llam an Lethó u_ . Es r a zona b le , de sd e luego, qu e
hos y ák oit is- que a tie ne a m enudo e l sign ific a do de ho-
m oú (junto con) ee y que a q uí se re fiere a la eco-r o ta ción»
. ' Euf emi sm o po r «mu er te •. La gente relacionaba 11 Apolo co n
apóilym i - mo rte-.
WII AMO....lTl • • Apollon • . Herm e~ XXXVII I, 575 ss .. y W . K . GUTHRIE , The 11 El ve rbo m6 slhai está, proba blem en te, empa rentado con la l. mos
Greek s Ilnd thei r Gods, Londres , 1 9 ~ 5 , pág. 73), pe ro en nin gú n c aso tie ne )' n ad a tien e qu e ver co n MOIlsa q ue p roc ed e d e ' Mo /1/ io (el'. SClt W ~ H R,
q u e ver con la s que no s brinda Sócrates a co nti nu aci ón. G rI~<,h isch~ (;~llmmalik, pág . 473).
' " En efeetu, se irura de la h<l._culec t iva o int en siv a q ue pru ced e d .· Il No ha y más tes timo nio que és te de qu e Lnó fuera lla ma d a L l ·
id eo' s m-, ef. a i. sa, lar. se'1'" Lo tra duci mos po r el p re fijo c as tell an o cc-, Ihd en ot ros d ialec to s.
404 DI Á L OGOS C RÁTI LO 405
rec ib a el no m bre de LelhtJ por pa rl e de qu ienes a sí la lla- Soc. - Ahora que s u segundo no mbre no es d ifícil de-
man e n raz ón de su fa lt a de aspereza, de la dulzura y .. sua- cir por qué fue puest o. .
vidad .. (l efon) de su «ca r ácte r » (éthos). HERM . -¿ Qué nombre ?
h Artemis" s e revela como lo «In tegre- ía t re més] y lo SOco- Sol emo s lla ma rl a P állas ¿ no ?
rec at a do por ca usa de su amor a la virgin idad; a unq ue pue- HERM. -¿ Cómo no ?
de que el que le pu so nombre la llamó ..conocedo ra de viro SOC. - Si pe nsamos, pu es, qu e este nom b re le ha s i-
tud .. (a re tes histora) o, quizá s tam bién , en la idea de que do pue sto, como yo imagino, a partir de la da nza a rmada ,
«od ia la arada » (ároton m ises áses¡ del varón en la mu jer. pen sa ríamos con propiedad 17 . Pues a la acci ón de «ele- e
Ya sea por una de estas razones o po r t od as ell a s. és t e fue va rse» uno mismo u o tra cosa, ya sea de sde el suel o o con
el nom b re que im pu so a la di osa el que se lo pu so. las manos, la llam a mos pá llein y p állesth ai, hace dan za r 407a
H ER M. - ¿ y Dión ysos y Aph rodíta ? y danzar.
Soc. - ¡Trem e nda pregu nt a , hijo de Hi pónico! Si n e m- HEII.M. - Ex ac t a me n te.
ba rgo, tie nen es tos d ioses una sue rte de nom b res q ue ha SOCo- El nombre de Pál/as, en ton ces, se e xplica de es-
e s ido impuesta tanto e n bro ma co mo e n se rio. Así pue s, pre- ta fo rma.
gun ta a ot ros po r la seria, que nada me im pide a mi d tser- HEII.M. - Y mu y exactame nte. ¿ Pero có mo in te r p re ta s
la r sob re la fes tiva ' 1, pues ha st a los d ioses gus tan de el otro no mbre?
bromear. Dioni so po dría ser lla mado e n broma el «dador SOC. - E l de A thé na ?
del vino s (DidoínousosJ; y a l vino, pu est o que hace c reer H EII.M. - Si.
a la mayo r-ía de los be bedo res q ue t iene n co rd u ra s in le- SOCo- Éste , a migo mío, tiene más peso. Ahora bie n,
ne r la , seria razona ble lla marlo o íonous (que hace c reer en pa rece que los a nti guo s tenían so bre Aten ea la mi sm a id ea
la cordur a). q ue lo s actual es en te ndi do s en Home ro. Y es que la m a- b
Sobre Afr odita no se r ía di gn o con tradeci r a Hesiodo, yorf a de és tos, c uando comen ta n al poet a, di cen qu e Ate-
d sino con venir con él que fu e llamad a Aphrudíta po r su na- nea es la respons able de la intelige nci a mi sma y de l pen o
cimie nt o de la «es puma » (apliroü) " . sa mie nto. Conque el q ue puso los nom b res pen saba, se-
HEil.M. - Po r otra pa rte, Sóc ra tes, no irás a olv id arte gún pa rece, al go s imilar sobre e lla ; y, lo que es más im-
de Aten ea , a te nie nse como e res, ni ta m poco de Hef est o y po rtan te, qu e riendo desig na r la .d nte tíge nc ta de dios ..
Ares! (lheoü nóesis), d ice - más o meno s- que ella es la «tn telí-
SOC. - No seria razonab le. genc ia d ivina ..(Theo nóa). si rv ié ndose de la a de otros dia-
HERM. - Desde luego q ue no. lectos, e n vez de la e, y eli minando tanto la i como la S.
y a un quizá n i siq uiera por esta razón, sino que la lla mó
... Sub re la ctim ulug ia de Ar lcm i,., d. M. R lJl ~. u S"NlIUl. • U nom o
Theon óé e n la idea de que ell a , po r encima de los d em ás,
b re d e Artem is do r io-ilirio. El imologia y u p.nsió n-, E m u i l.. 0 9411, 1-óO,
~· . La d eo " rl i Q celtjca y la Art e m i,. gr i ~ll a _ . Zepll)'f us 11 (1951 1. 89·95. «co noce.. tnoo úses¡ la s «cosas divin as » (la tñeku: Cla ro qu e
. n Es la fr ase mu es lra a la s cla ras el C.nkl ~ r fes tivo de es le jue go ta m poco es d isp a ratado que qu is iera ta mb ién desi gna r
e umológtco.
.. Tod avía P. KIleT$UlJol E,R (en Zeilsch rift !ü r ve rgleich. S prachforscl1.
XX XIII (1893), pág . 267) q u ie re hac e r venir es te no mbre d e áp l1 ro hod/· 11 En re a lida d , PalilÍ5 q u ier e dec ir «m uch ach a s (d. G U T HRIE, Th t
lEs «l a qu e ca mina sobre la espu ma • . Gruh .., pá g. 108).
406 DIÁLOGOS C RÁTILO 407

Bthon áe a la «inteligenci a éti ca » (t~ i éthei nóésis) M, en la do só lo u na vez más so bre Hermes 'Al , ya que Crát ilo a ñr-
e idea de qu e la di os a es esto. Y, ya sea é l o algún otro, la ma que yo no so y He rmógenes. In te nte mos, pue s, Inve st t-
lla ma ron d es pués Ath én áa tra nsfo rmán dolo en un nom- ga r qu é sign ific a el no mb re de H ermés, a fin de q ue vea -
bre má s be llo. según c re fa n e llos . mo s ta m bién s i la afi r mación de és te t ie ne a lgú n va lor.
H ERM . - Bie n. ¿ Y Hefesto q ué? ¿ Cóm o lo ex pl icas ? Soc. - En rea lida d, pa rece q ue Herm és tie ne algo que
Soc . - ¿ Acaso me pregun tas po r e l ge nu ino «conoce- ve r con la pa labra al meno s en est o , en que a l se r ..intér-
dar de la luz» (p háeos h is/ora)? pre te . th ermen eal y mensajero. a sí como lad ró n, men t í- 4080
H ERM. - Asl par ece. roso '1 me rcader. tod a es ta actividad gira en to rn o a la
Soc. - ¿No es e vidente pa r a c ualq u iera qu e éste es t uerza de la pa lab ra. Y es que. como decíamos a ntes, el
Phaistós (luminoso) a ñad iéndo le la e ? ..ha bla r . (elr ein) es se rvirse de la pa labra y lo q ue Home-
H E RM• ...,; Es probable - s i es que a t i no te pa rec e to- ro d ice e n m uchos pasajes {em ésa to «pen só », dic e el) es
davía de otra man e ra, como es natural. s inó nimo de ..maquinar. {m echan ésasthait: Conque, en viro
Soc. - Pu e s para que no me lo parezca, pregúntame t ud de a m bas cosas. el legi s lador nos impuso. por así de-
por Ares. cirlo, a est e di os que inventó el lenguaje y la pa la bra (y
H ERM. - Te pregunto. légein es. desde luego. s inónimo de ei rein) con est a orden :
d S 6c ..- Ento nce s, s i asl lo quieres . el nombre de Áres «hom b res. al q ue inventó el lenguaje (ei rein emésato¡ ha- b
se aj ustaría a lo «mascu lino» (árre n) y a lo varonil; pero, rl a is bien e n llamarlo E íremés • . Ahora, sin embargo, no-
si , por otra parte, se confo rma a lo rí gi do e inflexibl e (lo so tros lo llamamos Hu m es por embellecer. se gú n imagi-
c ual recibe el nombre de árre to n «ír rom ptble-). ta mb ién no, su no m bre. (Por cierto , que I ris ta m b ié n pa rece tene r
en este se nt ido se ria p ropio que un di o s guerrero por lo s s u nombre po r el hec ho de eíre ín, pu es era me nsaj e raj ",
c ua tro costa dos reciba e l no m bre de A res. H ERM . - ¡Po r Zeus! Entonces me parece q ue Crátilo
HERM. - [Desde luego! a fir ma con razón que yo no soy He rmog én és (nacido de
SOC. - Deje mos, pues, a los d ioses - ¡po r los di oses!-, He r mes): y es que no so y di est ro e n la pa labra.
que te mo segu ir conversa ndo so b re ellos, y p ro pónme Soc. - Pe ro es más. amigo mí o: el qu e Pan sea un h ijo
c ues tione s sobre c ualqu ie r otro tema q ue prefieras ..pa- doble de He r mes no ca rece de se ntido .
ra que veas cómo es la cas ta de los caballos de ..Bu ti- HERM. -¿ Pues cómo ? e
fro n ".
e HERM . - ¡Claro qu e lo haré cua ndo te ha ya p regu nta -

... Es le es el ún ico nom br e de dios sob re c uya elimo logia hay e cuer-
d o unani me e nt re los filó logos. Proce de d e hüma wmo nlón d e p jcd res e.
11 M~ ridie r traduce . in teligencia nat ural». No sé q ué en tie nd e po r ~I Todos los ed ito res el imina n, po r considerarla fuera de lugar, es-
es to ni có mo lo deduce de l textu griego. Me parece q ue , más bien, se re- ta últ ima f rase ref er ida a Iri s. No sotro s la re spet am o s como, en Ilene ral,
fiere a la in teli genci a • refe r id a al ¿l hQ$. (¿Ih ei es u n da tode lim itació n) a laslect u ras en q ue co inci de toda la trad ición ma nuscrita, s iem p re que
o . prác tica . a la que PLATÓN (c t. Banquete 209a} y ARISTÓTEL ES (Eriea a no haya motivos muy fun da d os pa ra rech aza r las . - Puede se r u na oc u-
Nic óma cc 1140a24) lla man especí fica mente ph rÓ ne$is. rren cia q ue introduce Sócrates parent étic a mente, co mo tan tas otras e n
l. Pa ro d ia d e /liada V 221·2, d ond e se ref iere E neas a la e xcele nci a est a sección .
dc lo s ca ba llos troya nos.
408 DI ÁLOGO S ("RÁTlt O 409

Soc. - Tú sa bes que el di sc urso manifi es ta la .. to ta ll- Soc. - ¿ En tonces qué prefieres prime ro ? ¿O ha bla mos
dad . ( IÓ p á n) y qu e se m ueve alrededor y no deja de hace r de heli os «e l so l•• como d ijis te ?
girar, y qu e es doble, ve rdadero y fa lso Vl. HERM . - De acue rd o.
HUM . - Desd e luego. SOco- Desde luego. pa rece qu e se ría más claro s i no s
Soc. - Por consigu iente, su ca rác te r ve rda de ro es sua- si rv ié ramos de la pa la bra dor ia (los dor ios, e n efec to, lo
ve y divino y h ab it a a rriba. entre los dioses, m ientra s qu e llaman Há1iosj. Seria. pues. Há lios en t a nto que «co ng re- 4091:1
su carácter fal so habita a bajo. entre la mayor ía de 105 ga » (ha fízei) a los hombres en el mi smo Jugar cuand o sa -
hom bres. y es áspe ro y t rágico .'. Pu es es a h í, en el gé ne- le. y lo seria tamb ién po rque no cesa de . gira r . (heílein)
ro de vid a t rá gico. donde res id en la mayoría de los mitos en su movimi ento a lrededo r de la ti erra , a unque también
y men ti ras. -se r ía verosím il- porque e n s u reco r ri do «ado rn a con
H ERM. - Des de luego. variopin tos co lo res . (poik ílle i) lo q ue nace de la t ie rra. Y
Soc. - Por consiguie nte, el que manifiest a ..Iodo . (pán) poikílt ein y a íoíei n s ignifica n lo mi smo .
d y siem pre h ace gira r se ría ju s tamente Pan Aip olos », el HERM. -¿ Y la «luna - (sel éne) ' q ué ?
hijo dobl e de He r mes, su a ve en sus parte s s uperio res, y soc. - É ste es el nombre qu e parece morti fica r a
áspe ro y ca bruno en la s inferio res. Conque Pán es o bien Anaxágoras.
la pal abra o hermano de la pal a bra, dado qu e es hij o de HERM. - ¿ Y po r qué?
He rmes: que nada ti ene de ex traño que un hermano se pa- Soc. _ Pa rece un nombre que manifiest a con mayor
re zca a s u hermano . Per o como te decía, feli z He rmóge- a ntig üe da d lo que aq ué l decí a reci e nte mente: que la luna b
nes, deje mos a los di oses. toma s u luz de l sol ....
HERM. - Al menos a es ta cl ase de diose s. Sócra tes, si H U M. - ¿Có mo, pues ?
lo prefieres. Pero ¿qué te im pide dis e rt ar sobre o tros " SOco_ S in d uda sé /as on y phós s ign ific a n lo mi sm o
co mo el so l y la lun a, los astros , la tierra. e l é ter, el ai re , (luz).
e e l fuego. el agua, la s estacio ne s y el a ño? HERM. - Si.
SOc. - ¡N u me rosos so n los te mas q ue me p ro po nes! SOC. _ y es ta lu z que ci rcunda la luna es s ie m p re nue-
Si n em ba rgo, consien to , si es q ue va a se r de t u agrado. va y vieja -si es ci erto lo que afirma n los partida ri os de
HERM. - [Claro que me va a com place r ! Ana x ágoras-e, pue s no ces a de p r oyecta r lu z nueva e n su
movim ien to alrededo r de la luna. m ient ras que la del mes
ante r ior es vie ja.
on Sóc rates m srsre en es te pri nci pio, que ya dejó sen tado más a rri· HERM. - Exactame nte.
ba (J85b) y q ue ta mo le im po rt a d ejar bie n claro. Soc. - y mu chos la lla ma n selanaia.
O) Sóc ra tes j uega co n el do ble sen tido de lmgilr.ós «trág i¡;oa y oca.
b ru no ». Aq ul se re fiere a In fa b ulacione s de la traged ia; más abajo, al HERM. - Exac to.
ca rác ter figu rativo de r a n como m..che e.. b rio de ci nt ura p..ra .. bajo .
•• A ípolo s sign ifica. p rop teme n te . «ca bre ro - {d e aú; «cab raol. pero 'lO En re ~lidad. es ta re o rte pa rece reJTKln ta n e /l Ta le s d e Mild o (d.
Sócra les lo po ne en rel ación con (u( (siemp re) p ol efn (ha cer-g ifil r), co mo P LUTA RCO, P/acila philowpho nml II 17 ). .
an tes a Apolo (ef. 405c). '7 Hasl " a q ui la d in'<Jl ugi a ~·s co r rec ta ( ·.·~lu>· m"J, Lo q ue 5 I gu ~' es
. , El texto griego es aqu¡ muy vago: 16n l oj ónde pu ede q ue rer de- tan exage rad a men te re busca do q ue no s hac e pen sa r de nue~o en e l ea-
ci r od io ses co mo > o «cos as co rno». Parece un a vag ueda d d elib e ra d a. r ácrc r iró n ico de lu da la secció n.
4 10 DIÁLOGOS CRÁil LO 4 11

So c. - E n c ua n to que s iem pr e tie ne luz nueva y vieja HERM. - Na da m á s lógi co .


e (sé/a s n éon ka i he non ae í} el no m br e m á s j us to que podría Soc . _ Mir a , e nto nces , si e ste no m br e , py r, no es ba r- 41 0a
r ecibi r se ria se laeno ne o áeia, pero se la llama selanaia u na baro. Pu e s no es fácil encajar lo en la le ngu a g r iega y e s
vez con t raído. evide nte que los frigio s " lla ma n a l fue go de esta fo rma
H E RM. - Desde luego , Sóc rates. que es te nom bre es co n un a peq ueña variante ; e, igu a lme nte , a l _a gua_ (hjdor)
p ro pi o de un d itirambo. Pe ro . ¿có mo e xp licas e l me s y los y a los «per ros» (k jnas), e tc.
as tros ? HERM. - Asf es.
SOC. - Al <me s e (meis) se d a j us to lla ma rlo meiés pro- S6c. - S in e mba r go , no hay que llev a r de m a s ia do le-
c ed ie nd o de meio ústhui (di sm in u ir), y los «a st r os- (ástra) jos e stos nomb re s por el hecho de q ue pueda dec irse a lgo
pa rece q ue lo man s u de nomina c ió n de l e rel ámpa go - (as- so bre e llos. De es ta forma, p ues . dejo a un la do el fuego
lrapl). En c uanto a l re lá mpa go, debe rla se r an astrap é por- y e l agua.
que «hac e volver la vist a . ropa ana.Hréphei), pe ro se le lla- En cuanto a l a ire , ¿se llama a ér, He r m ó gene s. porq ue b
ma astrep é por e m be llec e r lo. e leva nta » (ai rei) lo q ue ha y sobre la tie r ra ? ¿O po rq ue siem-
H ERM. - ¿ y qué del fu ego y de l agua ? p re . f1 uye_ (aei rh ei)? ¿ O por qu e, en su flu jo, se origina
d Soc. - De l «fuego » (py r) no tengo ide a y e s probable e l viento ? Pue s los poetas llam an atlas (vendav a le s) a los
que. o bi en m e ha ya a bandonado la Musa de Eutifr ó n, o vientos . Pu ed e que signifique, entonces , . 10 que fluye co-
q ue e ste no m bre sea de una d ifi cultad ex trema. Aho ra mo vendaval . (aét ó rrous), co m o si di jera p n euma t érrou s
bien. o bs erva la arti maña que aplico a todos los de e sta . 10 que fl uye como viento). Al eé te r- (ai t htr) es as! co mo
gu isa que se m e esca pan . yo lo e nt iendo: dado q ue «siempre corre» flu yendo een !or-
H ERM. - ¿Cuá l es ? no a l a ire . (aei theí pe ritan aéra). deberla lla marse, en JUs,
S oc. - Te lo d iré. Con té s ta m e: ¿pod r ías decirme de r íet e , ae ithes r. La «ü e r ra» (gl) m a nifi es ta m ejo r lo que
q ué fo r ma recibe s u no m b re el fuego ? q u iere s ignifica r co n tal que se la lla me gafa. Y es que gafa e
HU ,.,. - Yo no. por Ze us. deberla lla marse, en r igor. gennlteira (procre adora) co mo
Soc. - Ent o nc e s co nsider a lo que yo b a rrunto sobre afirma Ho me ro - pue s d ice gegáasi. en vez de gegenés-
e e llo: pie nso q ue los gr ie go s. y e s pecialmen te, los q ue vi- th ai (ser e nge ndra do}-- . Bien, ¿q ué no s q ued aba de spué s
ve n bajo dom in io bá r baro, han to m a do de éstos nume ro- de e s to ?
sos nomb re s " . H ERM. _ La s es ta ciones . S óc ra te s , a sí como la «a ña-
H ERM . - ¿ Y q ué. p ue s ? da . 100 y e l «a ño - {eniau t ós, e sos):
S oc. - S i un o inve st iga cómo e s r a zo na b le q ue estén
est a bl eci dos co nfo r m e a la leng ua grieg a y no confo r m e
a aque lla de la q ue e l nom bre procede, sabes q ue se en- .. No ha y co ns tancia de la pal abTII fr igia para e l fuego, pero e l gr.
co nt r a r ía en a puros. p9r Se corresponde con e l a rm e. h u r, lengua cercana a l frig io. (Cf., lam·
bien, a.a.a. (ju r, u mb ro pir y tccaric por - v . PISAN I, G/ollO/ogía indeu -
•• El pTéSla mo, que hoy es u n principio ele ment a l de la Lin llU lsi i. ropea. Tu rfn. 1961. pág. 277.)
CII, es a duci do aq ul (c f., lam bié n, en 41611) co mo una eslralage ma de Só- 100 E nia Uló5 es un c iclo de tie mpo que puede se r mu y su pe rior al
c ra tes cua ndo Se le re siste un a e timolo llla. Luego se rá rechazado como a fio nat u ra l (t /05). Probable men te, es tá relacionad o con e l cic lo de l afio
evas iva (d . 425e). agrtco la (la _afia da . castel la na). CE. J. HAIUI.1S0N, I hemis, Lond res, 196) .
412 DI ÁL OGOS C R ÁTIL O 4 13

Soc. - Pu es bi en, las «est a ciones » th ór a í} has de pro- co m o es lógi co, la in teli ge nci a, la co m p re nsión, el co noci-
n u nci a rl as como en anti guo árleo lUI, s i es que q u ieres sa- mi ento, la c ien c ia y todos los de más bellos no m bres qu e b
ber lo q ue es probable : en e fecto, so n húrai (límite s) de bi- has cita do .
do a que limitan los inviernos y vera no s, los vientos y los II E RM. - ¡Cla r o q ue no debe mo s desis tir antes de
fr ut os de la tierra. Y co mo «limi t an» {h orizou sai], ha bría t iem po !
qu e llama rles e n ju st icia horai. Sóc. - Pu es de ve rdad, [po r el perro !, q ue no c r eo se r
d La «a fiada» (en iautós) y e l «a ño» (ét as) es p ro bable que mal adi vino en lo que se me acaba de ocurrir: qu e los hom-
sean una so la c osa. En efect o, a lo que sac a a lu z y co nt ro - bres de la remota antigüeda d qu e pusi e ro n lo s nombres
la en sí mi smo ca da cos a que se c r ía y nace s ucesivamc n- - lo mis m o q ue los sabios de hoy - de tanto da rse la vuelta
te, a esto - lo m ismo qu e an tes con el no mbre de Zeus, buscando cómo son Jos se res, se m a re a n y, consecuen te-
dividido en dos pa rtes, unos lo llamaban Z éna y ot r os mente, les parece que las cosas gir an y se mueven en todo
Día- , así a esto uno s lo lla m a n enia u ton , de en heaut ái lugar IOJ . En re a lidad, no juzgan culpa ble de esta o pin ión e
(en sí m is m o), y o tros étos, porq ue etázei (con tro la). La ex- a su propia ex perienc ia int e r ior, s ino q ue estiman q ue las
pli ca ción co m p le ta es qu e la e xpresión en heaumí etázon cosa s mismas son así; qu e no ha y nada pe rmanente ni con-
(lo q ue co n t rola en sí m is m o), a un siendo ú nica, se pro. sisten te, sino q ue todo fluy e, se m ueve y est á lleno de to-
e nunc ia en dos pa rte s, eniau tós y etos, a partir de una ex- da cl ase de movimie nto y devenir co ntinuo. Y lo digo re-
presión ún ica. flexi on an do so bre todos es tos nombres de a hora.
H ERM . - En verdad, Sócrates , has a van za do much o. H ERM . - ¿ y có mo es eso, Sócrates?
Soc. - Parécem e que estoy ya p rog resa nd o en sab io SÓc. - Qui zá no has re parado en que Jos nombres r e-
duría. cié n citados ha n sido pu estos a las cosas, como s i todas
H ERM . - Des de lu ego. se movieran , fluye ran y dev in ie ran .
Soc. - En seguida lo dirás todavía m ás. H E RM. - No habí a caí do en ello e n abso luto.
4 11a H E RM . - Pues después de es te género yo, des de lu ego, Soc . - Pues bien, pa r a empeza r, el prime r no m be a l d
exa mi naría co n gus to con q ué cl ase de exa ctitud han sid o que a ludimos se refiere por comple to a es tas ca racte-
puest os los hermosos no mbres q ue se r efieren a la vir tud, rísticas.
c omo la «in te lige ncia » (p h rónesis), la «comp rensión » HE RM. - ¿ Cu a l ?
(sy nesis], la «justici a » (dikaiosy ne) y todo s los de es ta clase . Sóc . - El de p hr ónés ís (inteli ge nci a), pues es la «in te -
Soc. - ¡Amigo m ío ! No es livi ana la raza de nombres lección de l m ovimiento y el flu jo» (ph o rás ka i rh ou nóe-
que despiertas . Sin em ba r go , ya q ue me he ceñido la piel sis). Podría tambi é n ente nderse co mo «a provechamie nto
de león IUl, no he de amilanarme. sino m ás bien examinar , del movim ie nto » (ph orás ón ésis], pe ro , en todo caso, se re -
fier e a és te .
IU I Lo mis mo que en caso de la e (d. n. 53) en el alfabe to át ico ant i-
guo el signo o serv(a pa r a los fo ne mas o , 9 y 9.
Iul Pu ed e re fe rirse a la fábula de Eso po e n la q u e e l as no, ves tido q ue sea un a a lus ión vela da a Anus tcncs. quien h ab ía tomad o a Her acles
con p iel de león , pone e n fUga a homb res y a n imal es; o b ien , a la p iel del po r modelo.
león de Nemea q ue cubría la cabe..a y hom b ros de Heracle s. _ Es im. 103 Realmente e s tá aludien do, sin no mb ra rlo , a Her ácl it o . el. n . 68
probable, como s ugiere MIlRIDIE R(Pla lón..., vol. ¡, Int ro d ucción , pá g. 44), e t ntrod.
4 14 DIÁLO GOS CRÁTI LO 41 5
y si Jo acep tas, gnlJme(el ju icio) m anifie sta enterame n- Ade más , un laco n io ilu st r e tenía el no mbre de 5 60s
le e l a nálisis y la «o bse r vaci ón d el deveni r » (ga nes n ámé- y lo s la ce dem onio s d a n este nombre al mo vim iento e ve-
sis); pues " am án es lo m ism o q ue skope ín (observar). Pe- 10 b (Ihoós) 100 . Asl pues, sop hía si gn ifica «t oca r . e l «rno -
ro s i lo p re fie re s, esta m is ma pa labra nóisis es la e ten- vim ien to .. (epaphéJ, s upuesto q ue los sere s se m ueven .
de ncia ha ci a lo nu e vo . (néou hésis): el q ue los s e res sean Po r o tra pa r te. en c uanto a lo «bue no - (agath ón), es te e
e nu e vo s s ignifica qu e no dej an de deve nir. Conque e l qu e no m bre suele a plica rse a to do lo «a d m tra ble - (agastón) de
puso el nom bre de neóesis q u iso significa r que e l a lma la nat u ra leza. Dado qu e lo s seres se m ueven . ha y en e llo s
tie nde a esto, pu es a ntigua me nte no se llama ba noe sis, s i- rapide z y ha y le n tit ud . Ahora bi e n. no todo lo rápido e s
no que ha bi a que pronunc ia r dos e ''''' en vez de la é, ad m ira b le, si no u na pa rt e de e llo, y, prec isamente. _lo ad-
noées is. mi rable de lo r ápi do s (thooü agas rói) reci be la denomi-
SophrosYl1l (p rudencia) es la «sal va gua r dia del enten- nación de agathón.
dimie nm; (stne rta pnronlseos) q ue acab a mos de En cuanto a la «J us t ic ia » (dikaios jniJ, es fá cil compren-
cons ide r a r . de r qu e este nombre se aplica a la «co m p re nsión de lo jus-
4121.1 Y. po r otra parte, la «c ie ncia - {epíst émé] significa q ue to . (dik a{ou sj nesis). Per o dik aion (foJ usto) m is mo es difí-
e l alma de algún valor «sigu e » (h.epoméni) a las cosas en ci l. Cla ro que. hasta cierto punto, parece que hay acuer-
movim iento y no se queda atrás ni las adelanta. Por lo cual do po r parte de muchos, pero en seg u ida vienen la s dis-
hay que insertar una e y lla m a rl a epeist émé I~' . putas. Cua nt os consideran qu e e l universo es tá e n moví- d
S ynesis (co m pre ns ió n). por su pa r te, parece como si mi ento suponen q ue su mayor pa r t e no tie ne o t ro carác-
fuera igua l a «r-a cioc in io» (syllogismós), y cuando se d ice te r que e l de move rse y q ue hay a lgo que at raviesa es te
synienai (comprender). res ulta que se dice a bsolutamen- universo en virt ud de lo c ual se o r ig inan todas las cosas;
b te lo m ismo q ue epís tas th ai (es tar so bre). Pues syniénai y que e lJo es 10 m ás rápido y s ut il. Pues de otro modo no
(m a rc ha r con) s ignif ica: el a lma «aco m pa ña a las cosas . pod ria a travesar to do el unive r so, s i no fu e ra lo m ás sut il
(symporeúeslhai) en s u movim iento. Po r o t r a pa rte, soph- co mo pa r a que na da pueda co nt e ne r lo . n i lo más r ápido
ía [sabid u r ía) s ig nifica «toca r e l movimiento . [phor ós co mo pa ra r el a c io na r se con lo s de m ás se res como s i és-
h áptestha ñ, a unq ue esto es m á s OSCU I"O y ex t raño a nues- tos es t uvie ra n e n reposo. Así pu es, dado qu e gobie rna to-
Ira le ng ua . Pero hay q ue reco r da r. e n los poetas , Jo qu e do lo demás e a t r a vesá ndc lo» (dia i"ón) se le dio ajus ta da- e
dice n en m uchos pasaj es de a q ue llo que avanza rápida- me nte e l no m bre de dika ion añad ie ndo la fue r za de la k
mente un a ve z q ue ha c omenzado: d icen esythi (se p re- po r mor de la e ufoní a .
ci pitó). Has ta este punto, pu es, m uchos co nviene n, co mo de-
cla ma s a n te s. e n qu e est o es lo jus to. Pe ro yo, He r m óge- 4 1311
" Ia gr a fía d e ¡ en e l al-
1(01 El te xto d ice , en re a lid ad , .dos e i. , que <
ne s. co mo soy infatiga bl e en este asunto, m e he info r m a-
fab eto jonio, co mo ou lo es de o.
l UI Es u n pasaje d iscu tido , Lo mis mo qu e en 437a (don de se vuelve ,.... QUier e de cir Sóc ra tes qu e la silaba so- d e $Qp hitl ha b ría qu e po-
a explica r es ta pa lab ra en sen tido opues to , es decir, con la id ea básic a ner la en re la ció n con la ra íz ' /h ..,. «rá pido » , que en la co n io es »s o-, J>Qr
de e reposo s, es p re ferib le seg uir la lectu ra de lo s mejores MSS. em biJ.. la espiranüzación de las as pira da s qu e se produce en laconio ya en el
1/0 '111'5 y epi5ttmi'l q ue enc u b re -sin du d a, por yo ta cismo- un es pera- S. v, a unque no se refleje epi gráfica men te has ta el IV(d . Buc x, The Greek ...•
do epeisttmi . pág. 597).
4 16 DIÁLO GO S C RÁTI LO 417

do en conve r saci ones sec re tas de que lo ju s to es también J-IERM. - Pa rece, Sócrates, que esto se lo t ie ne s oí do
lo ca usante (p ues lo ca us a n te es aq ue llo «po r lo q ue.. a alguie n y que no es tás im provisa ndo .
-di ' hó- IQ' a lgo se gene ra) y a lgui en me d ijo en priva- Soc. - ¿ y lo de más qué ?
do qu e era aj us ta do asigna rle este nom bre por dichas H ERM. - En a bs ol u to.
ra zones. Soc. - Esc uc ha e ntonces, pues quizá pod r ía ment ir te'
Pero cuando Ir a s c u-los , vue lvo a pre gunta rle s tr a nq ui- ta mbién en lo demá s d ici en do qu e lo ex po ng o si n ha berlo
la me nte: «a migo. ¿qué es. pu es , lo justo si ello es as í ?.., o ido.
parece que ya p regu n to má s de lo co nven ie n te y qu e me ¿ Después de la J u sticia qué nos queda ? la «v ale n tí a »
b pa so de raya l• • Dicen qu e ya tengo su ficie nte info rm a- {an d r eía} no la he mos toca do. creo yo. Pu es b ien, es e vi-
ción y. de sea ndo a tiborra rme. tratan de de cirme cada uno den te qu e la _inju sticia » (adikía) es ver daderamen te u n e
una cosa y no es tán má s de acuerdo. Pu es uno afi rma qu e obs tác ulo a lo que a t raviesa y la va len tia apun ta a ello en
lo jus to es el sol: sólo él «a t ra vesa ndo .. {d iaionta} y que- la idea de que ha recib ido su nombre en la lu ch a - a unque,
mando gobierna los se re s. Así pues, cuando, satisfec ho por en la realidad, si es que és ta flu ye. la lucha no es sino el
haber oído algo bello. se lo comunico a alguien , éste se flujo en sentido contrario-- . Si se sup rime. pues, la d de
burla de mi des pues de oírme y me pregunta si creo que andreia, el nombre an reía po ne de manifiesto por sí s6 10
no hay nada ju st o en t re los hombres una vez que se pone es ta ac tivida d ' ". Claro que andreia no es un flujo cont ra-
el sol. rio a todo flujo, sino a l que fluye contra lo justo; en caso 4 14a
e Ahora bi en , como yo persisto en preguntarl e qué ex- con tra r io, no se elogiarla la valentía. Ta mb ién lo e ma sc u-
p licación ofrece él , a fi r ma que e l fuego ""'. Pe ro no es f á- llno - (árren) y el «va ró n - (anlr) se refi e ren a algo parec í-
ci l de e nten der. Otro sost iene que no es el fuego, si no e l do, a la «cor r íen re h acia a t rás » (áno rhol), mie ntras que
ca lor que res ide en e l fuego . Otro dice burlarse de todo la .. m ujer-e (gynl ) me pa rece que tie ne qu e ver con .. gene-
es to y q ue lo j usto es lo que d ice Anaxágora s, el noüs (la ración . (go nl). lo .. fe me n inos (th l ly) parec e que ha recio
r azón], pu es ésta es a utónoma y, s in mezcla rse con nada, bido s u nomb re a partir de la .. mama » (thlll) lU. y és ta
go bierna tod as las cosas at raves án do las. En este p unto, ¿ no se rá así, Hermóge nes, porque ..hace c recer » (lerh élé-
amigo mio, ya me e nc uen tro en ma yo res a pu ros que an- nai) como s ucede con las planta s de regadío ?
d tes de t ra ta r de s a be r q ué cosa es lo ju sto lid . Ahora b ien , H ERM. - Sf que lo parece, Sócra tes.
al me nos el nom b re, cosa po r la que andábamos invesñ- Soc. - Es más: e l mis mo verbo thállein (brot ar) me pa-
ga ndo, es cl a ro que lo t ien e po r es tas razone s. rece qu e representa el crec imie m to de los jóvenes, po r-
que se prod uce ráp ida y re pentinamente. lo cual, po r co n- b
s igu ient e. ha imit a do ,n con el nom b re ada p tá ndolo a
' 07 Es la m isma e xp hcación de más a rr iba (d. 39óa.b ¡ para la fo ro
m a Dio del n omb re de Zeu s.
)(JI Locución pro ver b ia l, cuya traducc ión litera l seria «saltar por en. a, Atlre {a est arla en relación co n el ve rbo anarrtitl , . !I uir con tra co-
cima del fo so s. rricnlh <1 -bacin arribas CE. inira, án o rnQI.
''''' De n uevo, la recrra d e He rá clil o sin q ue se le nombre expre- 111 Etimo logía co rrec la.
sa mc n te. 11I Ta nt o el verb o apeiká uir¡ como m em imlta i s u po ne u n ad e la nto

IIU Tampoc o e n el Fedón (96b y ss.) le pa rece su fic ien te a Sócrates de la te or ía d e la mim esi s que Sóc rates no int roduce ha sta 423 ss. Ha sta
la teo rl a de Ana ltágo ra s. a hora no se ha dic ho que e l no mbre imite a la co sa.
61. .- 27
,
.'
l

418 D IÁLOGOS CRÁTI LO 4 19


part ir de thein (correr) y hállesthai (sa lt a r ). ¡Pe ro no e s- HERM . - Cierto, e
tás vie ndo que me salgo de carr e ra, por así decirlo , cuan- Soc. - y m u y c ie r to, en verdad. Pero tú, mi sabio á r-
do alcanzo t e r r eno llano y nos quedan aún n um e rosos te- bitro, debe s, c r eo yo, vigilar [o que es c om edido y razo -
mas que pare cen im porta nt e s! nable ,
HERM. - Dices verdad. HERM. - Me gu stada.
Soc. - Uno , a l m enos, es ve r q ué quier e decir la pala- Soc . - También a mí, Hermógene s . Pero no seas e x-
br a t échn é (arte). ce siva me nte riguroso, am igo mío, 4 15a
HERM. - De sde lu ego .
no vayas a quitar de mis miemb ros la fuerza 111,
SÓe. - ¿No signific a e sta pa labra «poses ión de razón »
e (he x is nou), si le qu it a mos la t e int rod uci mos o e n tre la pues ya me encam ino a la cumbre de lo q ue t en go dicho,
eh y la n y entre la n y la e ? 11', c ua ndo hayamos e xa m ina do m ichan é (artificio) de spués
H ERM. - Muy fo rzado es e sto, Sócrates. de techni,
Soc . - ¡Ben d ito He rmóge nes! ¿No sabes que los pri- Mechan/! m e parece qu e significa «cum p lir un largo re-
m e r os nombres que se impusieron e stán ya sepultados, corr ido » (án e ín epi polly), pues to po lly sig nifi ca sin du-
merced a la ornam entación y a l tiempo, por lo s que quie- da. Io m is mo que mékos, «un la r go r ecorrido» , Pue s bien,
r en vestirlos de tragedia añadiendo y quitando let r a s po r e! nombr e m echane se compone de ambos, mékos y áneín.
e u fo n ia y r eto r ciénd o los por toda s partes? Porque , ¿no te Pero, co mo acabo de decir, hay que llegar a la cumbre
parece ext raña la introducción de r e n la palabra kátop - de lo que nos hemos propuesto: hay que investi ga r lo que
tron (es pejo) 1I~ ? Pues ta l es , c r eo yo , lo que h a cen quíe- s ignifi c a n los nom bres arete (virtud) y kakía (víc io). Pue s
d ne s no se ocupan de la verdad y s í de hacer figura s co n bie n, uno no lo veo claro, pero el o tro me parece evide n- b
la boca. Hasta el punto de que , a costa de in tr od u cir nu- te , pues es tá en consonancia con todo lo anterior. Como
merosa s adiciones, terminan por conseguir que nadie com- la s cosas están en movimi ento, todo «lo que se mueve ma l »
prenda lo que s ignific a el nombre. Así. por ejem plo , a la (kak ós ión) se r á kakia. y cuan do el moverse m a l ha ci a la s
Es finge la llama n Sp hi nx en vez de Phíx '", etc . cosas su cede en el alma, sobre todo entonces recibe la de-
II ERM. - Así es . Sócrates. nominación general de vicio . Pero qué cosa sea e l move r -
Soc. - y si un a ve z más se pe rmite in troducir y supri- se ma l creo que está claro tamb ién en la «cobard ía» {dei-
m ir lo que uno q uiera en los nombres . se rá muy fácil adap- tia), nomb re que aún no hem os tocado, sino pasado por
t a r cualquier nom br e a cua lquie r cosa. a lto, aunque deberíamos haberlo examinado de spués de e
la valentía, Pero para mí que he m os pasado por a lto mu-
c has otras cosas. La cobardía, en su m a , s ignifica una tra-
11. S igui endo las dir ectrices de Só crates el nombre que resul ta es .
ba poderos,,!, del alma, pues lían s ignifica fu erza de al gu-
en efecto. ech r:máe . q ue posee razón • .
111 Obseva ción desafortu nada q ue pon e de manifi esto una idea no na manera,
muy cl ara de los d iferen tes elementos d el nom br e. -/ro n es un s ufi jo de Conque la cobardía sería la «t raba exc esiva » y eno r-
ins tru men to. me del alma (desm ós lían). Lo mismo que t a mb ién es un d
•" La p/'¡x, hija de Eq uidn a, a la q ue lla ma H E Sl o DO «fu ne s ta pa ra
los c ad me os - (c f Teogonía 326), pued e ser, en principio, diferente de la
Esfi nge con la qu e po steriormente fue id en tifk ad a. 117 Ilíada VI 264. 6 5.
420 DIÁLOGO S C R.Ü ILO 421

m a l la «escas ez de re c u rs os » (apo ria) y. como e s ló gico, S oc . - Es to es m á s d ifí c il de co m p re nder 11• • Y, si n


lod o aquell o q ue sea u n im ped ime nt o para el m ovi m ie n- em ba rgo, e l no m br e mi smo lo d ice; h a si do va riado só lo
to y e l «ca m ina r. (po reúesthai). Pues bien , es cl a ro que mo- po r a rm o nia y por la ca nt idad de la 0 11 ".
ve r se ma l s ig nif ica ca m inar con im pedime nt os y tr a ba s . H ERM. - ¿Có m o as í ?
Cuando el a lma, pue s, lo ex pe rimenta, se encuentra llena Soc. - Este no m bre parece un so brenomb re de l
de vicio. Y s i vic io e s e l no m bre pa ra ta l est ado, su co n. pensa m iento.
trario se r ia ..vi rt ud . {a rete} y s ign ific a, en pr imer té rm i- H ERM . -¿ Qué q u iere s deci r ?
e no, abu nda ncia de rec ursos y. des p ués, q ue el flujo del al- Soc . - Ve a mos . ¿ Qué cosa p iensa s t ú que es respcn- e
m a buena e s tá s iem pre en libe rtad . De tal fo r ma q ue. se- sa b le de que c a da ser reciba no m b re ? ¿No e s aque llo q ue
gún parece, lo q ue - Huye- (aei rh éon) s in t ra bas n i im pe- im pone lo s no m bres ?
dimentos ha recibido este nom bre como so brenombre. Es H ERM. - Por co m p let o.
correc to lla marla ae íretun (s ie m pr e fluyente) y. tal vez. Soc . - ¿ y no se ri a e s to el pensamiento ya se a de los
s ignifica «de sea ble» (haireten) - dado que e s e l hábito m ás d io ses, ya de los hombres, o de a m bos?
deseable-e, pe ro se llama areté por cont racci ón. Puede que H UM. - Si.
digas que esto y inven ta nd o, pero yo afirmo q ue s i es co- Soc. - ¿ Ento nce s lo que da nombre a la s cos as y lo que
r rect o lo q ue ex plic a ba a ntes. el vicio, tambien es cor-ree- se lo s igue dando w es lo m is mo. esto es, el pe nsa-
to e ste no m b re de a rert. m ie nto?
416a HERM . - ¿ Y el de kakón (m a l) con e l que has explica - HU.M . - Así parece.
d o mucho de lo a nte r io r? ¿ Oué s ign ific a este nombre ? SOC . - ¿ Y todas la s c r ea cione s de la mente y e l pens a-
S oc . - [Extra ño me parece , por Zeus , y d ifíc il de con- miento no so n acaso elo gia ble s y la s q ue no lo son.
jetura r! Así es que a plic o ta m bién a és te la artimaña de cens u rab les?
m a rra s . H E RM. - De sde luego.
H U M. - ¿Cuá l? Soc. - Pues bi en. ¿lo c ur a ti vo no produce medic ina s d
soc. - Sost e ne r q ue e s un no m b re bár baro. y lo co ns tr uct ivo const rucciones? l O có mo lo e nti ende s
H ERM. - Y parece q ue tu a firmac ión es exacta. Pe ro tú ?
s i lo p refie re s , dejemos e sto y tra tem os de ve r si está bien H EKM. - Así.
puesto e l de ka/ón (be llo) y aisch rón (feo ).
SOC. - En re a lid a d. m e parec e cla ro lo q ue sig nifica
b aischr án, pues ta mbi én e stá e n consonancia con lo ante - 11. Ya en 384b, Sóc rate s ha bla a lud id o a t a n t iguo p ro ...e rbio . eS dí-
r ior. Parece que el nom ina do r no deja de envilecer a lo trci t saber cómo es lo bello _.
1I~ Es d ec i r . se r a a ntiguamcnte ka /oull, cf . n . sigo Má s ab ajo lo ex-
q ue es torba}' co n tie ne e l fl ujo de los se res. Así q ue a lo
p lic a co n ma yu r cla ridad.
q u e s iempre «co ntie ne e l flu jo » (isch on ton rhoim ) le ha 'jU Aquí est a blece S óc rates una dife rencia muy su ti l e ntre 16 k" lt·
impu e st o el no m b r e de aei scho ro ún. Ahora , s in em barg o, san (participio aoris to n eutro) y ro kaíoün (part ici p io prese n te neut ro)
la ge n te lo lla m a aischr ón por co nt r a cci ón. de k" lb.J. Se u-ata, en deftn ilivll. de as im ilar lu ka/ón (Iu bellu) <;o n tu k ,,·
H ERM . - ¿ y lo kalón (bello)? l"liO! (lo num in at ivu) (d .• m ás ab a jo, . lu nu m in ati vo [prodUl·~·) C\l~a s be-
Ha s . ). Dc to das fo rma s. lo qu e opon c a lo s do s par t ic ip io s no es cf uc m-
po (como t raduce Mér id ie r), sino el a spec t o.
422 DlA LOG OS C RÁ TI L O 4 23

Soc . - E n ton ces ¿ t a m b ié n . 10 no m in a t ivo (lÓ HERM. - ¿ Y lysitel oún q ué ?


ka io ún¡ 11 1 cosa s bell a s (k aJá) .? Soc. - Parece , He rmó genes, que no es co mo los ten-
HERM. - Tiene q ue se r así. deros lo emplean cuando se cu b re la in vers ió n . Te ngo pa-
Soc. - ¿ y e sto es . ta l como decimos. el pensamiento? r a mi que lysiseloún no se d ice en este se nt ido In . s ino e
H U M. - Desde luego. por q ue. siendo l~ la parte m ás rá pida del se r, no permi-
SOC. - En ton ces kalón <lo bello) es u n so brenom bre de l te que las cosas se detengan ni que el movimiento a lcan-
pe nsam ien to q ue produce la s cosas que sa luda m os con e l ce t é r mi no y se d e tenga o cese; antes bien, s i trata de pro-
nombre de be llas. d ucir se u n términ o de éste , lo eli m ina constantemen te y
H E RM. - ¡Claro! ha ce ince sa nte e inmo r tal a q ué l. En este se nt ido me pare-
e Séc. - Bien. ¿ De los no m bre s de es ta cl a se c uá l nos ce que lysiteloun ca lifi ca a l b ie n. pues . 10 que e lim ina e l
q ue da ? té rmino . (ljon tó télos) de l movim ie nto e s lysitel o ún.
HERM. - Los q ue se r el a cio na n co n lo bueno y lo be- Ajeno a n ue s t ro d ia lec to e s óph élim on, de l que Home-
4 17a 110 : lo «conve niente - (symphéron), «ren ta ble- (lysi teloún~ r o se s irve a m e n udo, de ophéllein (engordar); y é sta e s
«p ro vec hos o» (ophélimon), «Iucr a t ívc .. (ke rdáleon) y su s otra designa ci ón de auxe in (acrec en tar) y poiein
co nt rari os . (hacer) 111.
So c. - En r e a lida d, pod rí as encont r a r a hora el s ígn í- HERM. - ¿Y los co nt r a r ios de éstos ? ¿Cómo son ? d
ficado de symphé ron (convenie n te), s i te fijara s en lo an- Soc. - Cuan tos n ie gan a é stos no ha y por qu é revisar-
te s d ich o. Pa r ece he rma no de l «co nocim ien to» (epi ste me), los , pien so yo .
p ue s no s ign ific a otr a co sa que e l e mo vim ie n rc sim ult á. HERM. - ¿ Cu á le s so n?
neo . (há ma phorá) del a lma co n la s cosas 111: lo que se ob- Soc. - AxY mphoron. anópheles, atvsueles yak erdés.
t iene e n virtud de és te, pare ce ló gico que re ciba el nom o HERM. - Es cier to lo q ue d ice s .
bre de sy m ph éron y sjm phora a pa r ti r de sy m pe ríphe res- Soc. - Pero s í bla berón (dañino) y iémi ódes (r uinoso).
thai (m o verse a lrededor sim ultáneame n te) '". HUM . - En ve rdad, blaberon (lo da ñino) q u iere dec ir
Ke rd áleon (lucrativo) viene de Icé rdos (lucro), y kérdos . 10 que daña e l flujo . (lo bl ápton Ion rhoún), y bl ápton (lo e
b manifies ta su significado si se introduce en e l nombre una que daña), a su ve z, sign ifi ca lo que quie re «s uje ta r » (háp-
n, en vez de la d: califica a l bi e n de otr a forma. Como és te
- se mezcla _ (kc ránny tai) co n todo a tra vesándo lo; le US És te es, predu .mente , §u ,..,nlido.
im puso 1/4 este nombre por calificar esta vi rt ud suy a, pe. I~ El Bien.
ro in t rod ujo d. en ve z de n. y lo pron u nc ió kérdos. 117 Frase ~scu ra temo po r elre xtc , q ue e s lá COrrUpIO. como por su
co n teni do . En c ua n to a l te xto: a l co nserva mos hOí co n la mayorla de lo s
111 La co njC't u ra kllloú n (po r kDlón MSS.) de Ba d ham se impone po r editores y entendemos ' ói ophtllei>! co mo una a posic ión r«l ifical iva( _de l
s i misma d espub del p a saje an terio r. q ue se s irve Homero, u d« ir , baju la fo rma Dphtllti>! ~J; b ) ma nt e nem u s
Ul CI. la e " p lica ción de epis tl mi, en 4 12a , co mo q ue . e1 al ma ... s i. la lectu ra de lo s MSS. Dú.rei" k Di poei>!, au nq ue u evidente q ue hay co-
gue a la s cosas •. rr upc ión. De las cu nje tu ras p ro pu es tas. do s s upo ne n q ue ha ca ldo alg o
In Algu no s edito res s igu ien do a Stallbau m as ign an éoike a He rmó- (pléorl, ORElu;piorlll. HI!INDO RF). y una , tam bié n de He in oo rf, propon e sus-
gene s, inte rrump iendo lnnece sar-íame at e e l d iscurso socrá tico . Aquí la mo titu ir po ie f" por piatn ein. _ Oph tlimun n o só lo no es ajena a l a uco. sino
b ié n re sp etamo s la tra d ició n ma nu scri ta . qu e está doc u me ntada e n e sta époc a sólo en áuco Icf. L5·J , s. v.j. E l ve r-
124 El no minad or. bo opiJé/lein, en ca m bio, s( es dia lec tal: es u n «eo ltsmc s de Hom ero.
424 DIÁLOGOS C RÁT ILO 425

tei n); pe ro «suje ta r » (háptein) y «a tar » (defn) s ign ifican lo t iva. Ahora, s in embargo, en ve z de i emplean ei o e, co mo e
mismo y siem p re so n un ba ldón. Por cons igu iente , ..lo qu e s i en ve rda d fue r a n m á s magnificente s .
q u iere s uje ta r el flujo » {t ó boulomenon háplein rhoün) se- H ERM. -¿Cómo e s es o?
rí a m uy e xac ta me n te boulapte ro ún , a unq ue se d ice blabe - soc. - Por eje m p lo, los má s a nt iguos lla ma ba n himé-:
rón por e m be llece rlo , seg ún creo. ran a l d te y o tr os , heméran; lo s de a ho ra, s in em ba rgo,
H ER M. - Sócrate s , de verdad q ue te sa le n re carga dos h émeron.
los nombr es . As í a hora me ha parecido co mo s i e n to na- H ERM. - Asl es.
r a s el prelud io del nomo III de Ate ne a , c ua ndo ha s pro- Soc. - ¿ Y no sabes que só lo es te no m bre arcaico m a-
4 180 nu nci ado e l no m bre és te de boulapteroún.. nifies ta la in tención de l que lo puso ? En efecto, como la
Soc. - No, Herm óge nes, yo no soy culpable. sino qu ie- lu z na c ía de la oscu ri dad, con la complacencia y ..de se o » d
nes le han pue st o e l nom bre. (h im ei rous in) de los hombr es, le d ie ron el no m b re de .
H ERM. - Tienes razón. Pero ¿ qué se n a, pues , e l nom- . h ím éran.
bre zimiódes (ruinoso)? H EII. M. - ¡Claro!
SOC. - ¿Qué se rá lemjodes? Mira. He rmógenes, cómo SOCo_ Ahora, sin embargo, no reconocerlas lo que s igo
tengo razón c ua ndo di go que, por a ña d ir o quitar letras , ni fica h ém éra de inflado uo q ue está. Con todo, al gunos
m odifican muc ho e l s ign ific a do de los nombre s, hasta el est iman que ha recibido e ste nombre porque en ve rdad
punto d e que co n una peq ue ña variación co nsiguen, a ve. el ..d ía » (himéra ) civiliza lJl (hi m éra poieií»,
b ces, que s ignifiq uen lo co nt r a r io. Po r ejem p lo, en d éon H U M, - Me pa r ec e bien.
(obligatorio); he r e flex ionado so br e este nombre y de ello SOc. - Tam bién sabes q u e a l ..yugo » (z,ygó n) lo s anti-
acaba de ocurrtrse me lo q ue iba a decirte: e sta nuestra g uos lo lla m a ban duogón t U .
hermosa leng ua de ho y ha retorcido lo s no m bres déon y H ERM. - De sd e luego.
zé m i ódes hasta ha ce rl os sig nifi car lo cont rario; ha borra - SOCo_ Y s in e mbargo, z,ygón na da pone en claro, m ien-
d o lo que s ign ifican, m ie ntras que la ant igua lo mue st r a t ra s que duogó n es un no m bre justo e n virtud de la unión
a la s claras . de u na ..yu nta » (duoin) co n vistas al ..a rra st re » (agógtn).
H ERM. -¿ Qué q u ieres deci r ? Ho y se d ice z,ygón, y e n muc hos o tros casos sucede lo e
Soc. - Te diré. Ya sabes q ue nuestros antepasados em- m ismo.
picaban m uc ho la i y la d 1:t9, Y sob re todo las m uje r es , H ERM. - Claro.
que so n preci sa mente la s que co ns e rvan la le ngua prjrni - SOC o_ Pue s b ie n, según esto, para e m pezar, lo que se
lla ma déon (obligatorio) sign ific a lo contrario de los nom-
Il " Comp os ici6n'ci taród i<:a . o rigi na ria men te en honor de Apolo, qu e
con ste d e s ie te p artes además de l . pr elu dio ». Ta mb ié n POLUJX (I V 77) 11<1 d . 414c.
Li l . <ves tido de tra ged ia _ (let ragoid imbl<Jn).
al ude a u n no mo de Atenea. Lo s co mp ues to s la rgos y co m p licados so n 111 IflmérlJ poieín sign ifica ta mbié n - dc mesuc a.. c ua nd o el objt to
c arec te rrs uc cs d e la IJrica (c í, A. M EILLET, Aperfue d 'une His /oire de la so n a ni ma les y e cultiva r » cu an do son p lant as,
[mIgue grecuue, Pa rís, 1\l 30!). III Es to es ine xacto. Zygón procede de la ral:t lde. ·yu g·, d . la to
'lO Ign o ram o s e n qué se basa Pla tón p ara em itir la l ju ici o qu e co n- iugum, an t. ind . yugarn, e tc . Sócrates pue de e st ar pensa ndo en la Io rma
t r a s te cu n la ace rta da obse rva ci ón q ue le sig ue. So b r e ésta . c f., lam b iell, dor ia (ta mbi én eo lia) dUg Ó5, fruto de ot ra evo lució n fon éti ca (d . E.
CKERllN, Ve orato re 12 (iaeutu s mulieres incarrup /am anuquitatem SC HW Yle ll, Ina lectoru rn graecorum eumpla epigraph ica pctio ro, Lcipzi g,
con servun/). 1923, nn . JgO, 3 17 y 466 .36),
426 DIÁLOGO S CRÁTILO 427

b res qu e se relacionan co n e l bie n: lo obliga torio es una nón (lo penoso), m e pa r ece ajeno a n uestra le ngua m.
forma de bi en y se m a n ifiest a co mo una «a ta d u ras (de s- Dd jne (aflicción) parece q ue tiene este no m b re a pa rt ir
rn ós) e impedimento del movimiento, como si fu e r a he r- de la ..pe ne t raci ón - (é rldys is)cle l dol o r. Ach th édón (pesar)
m ano de lo dañino. es claro, pa ra todo e l m undo, q ue es nombre figurado del
HERM. - ¡Y bien qu e lo parece , Sócrates! peso del movimiento. Chará (a le gri a) parece qu e ha s ido
SOCo- Pero no, s i no s se rv imos de s u nombre arcaí - llamada así po r la «e fu si ón- (diáchysis) y facilidad del e flu-
4 19a ca , el c ua l es mucho más p robab le que esté mejor pu esto jo » (rhoé) d el a lm a. Térp sís (goce) procede de terpn ón (go-
que el de ahora. Será a corde co n los b ienes an te s a ludi- zoso) y lerpnón tiene su nom bre del e des bza rme nto » (hérp- d
dos. s i e n vez de e. le devue lves la i co mo a nt ig uamen te: sis) a través de l a lm a y se a se meja a u n • so plo- (p~'ot); en
e n efec to, diián (lo que at rav iesa) - y no déon- s ign ifica j ust icia se lla mad a herpnou n, pero con el t iempo ha ca m-
el b ien , y esto ya es un e logio. De es ta forma e l q ue pone bia do a te rp nó' l.
los no mbres no se cont ra d ice UJ, s ino q ue tan to deon co- Eu ph rosy ne (bie nesta r) no necesi ta ex plicación: es cla-
m o ophélim on, Iysitelo ún, kerd áleon, agathón, symphéron ro pa ra todos que ha tomado es te no mbre -en justicia
y eúpo ron s ignifica n lo m ismo : de sig na n con no mb res dis- el de euphero syn é a u nq ue lo lla me m os euph rusYné - · de l
tin tos a « lo que ordena »(diakosmo ún¡ y «se m ueve »(ión). he cho de q ue e l a lm a se «m ueve bie n aco rde co n las c o-
b y es e log ia do en tod as pa rt es, m ien tras q ue lo qu e co nt ie- s as» (eu syrnphe restlvai).
ne ;Y ata re ci be censuras . Tampoco es d ific il epithy m ta (apet ito): es evidente q ue
De otra p arte, zimí ódes, s i le dev uc lves la d e n vez de debe su nom br e a la fuerza «que se dirige al ánimo - (epi
la lo de acuerdo con la le ng ua arcaica, se te r e vel a r á co- thym ón ioüsa). y thymós 1.I(i ten dría este no m bre del a rdor e
mo el no m b re im p ues to a . 10 q ue permite el m o vim ie n- y ebu llición d el a lma , Po r o tr a pa r te, hime ros (deseo) tie-
to » {do ún ti lo ión) bajo la fo r m a d émi ódes. ne este no m b re po r e l flujo que a rrastra al alma so bre to-
H ERM. - ¿Y hedonl (placer), lj pe (do lo r), epish ymta do. Como " fluye te ndiendo - {hi émen os rhe i) y d ir igié ndo- 420a
(apeti to) y o tros semejan te s, Sócrates ? se co n a nhelo a las cosas -y de esta fo rma, desde luego,
Soc . - No m e parecen n uy diflciles, He r mógenes. As í, a rra st r a a l a lma co n la e te nde nc ia de la co r r ie nte» (h ésis
hedonl(placer): tal nombre parec e tener la actividad ten- ris rhoés~. a partir de toda esta capacidad recibi ó el nom-
dente a l ep ro vec ho- (ó nesisJ, pe ro se ha in sertado la d, de bre de hime ros. Más aún: llámase pó thos (año r a nza), a su
e forma qu e, en vez de heo nl, se llama hidorll. Y ljp¿ (do- vez. para indic ar que no es deseo de lo presente, sino de
lo r) parece que ha recibido s u nombre a partir de la ..di- ..lo alejado . (álloth i p ou ón los) lJl" y ausente . De ah í que se
solución» (diálysis) del cuerpo, la q ue tie ne el c uerpo e n lla me p órh os lo que se lla ma ba himeros c ua ndo esta ba pre-
ta l esta do. Anías (sufrim ien to) es lo que estorba e l
m o vim ie n to l lO . y alged(jn (pena), lla ma do así de ló algei-
US En gr . .llenikótr (d . n. 65). Es, e n d edo, pa lab ra jónica , docu men-
tad a e n He ródo to e m póc ra tn y e m pleada po r lo s poc la s áncos, espe-
IJJ En 438c va a afirmar, p reci samen te. lo cont ra rio: q ue e l nomi- c ia lme nt e los rraged íógra fos.
na do r s e con tra d ice. Como en ot ras ocasi o nes, Sócrates d eja cae r una IJII Tllymós es aq ul, cspe cifica mente, el principio ira scible <.Ie l alma.
trase q ue desp ués va a ser con tes tada. m Sócrates relacio na p áthos con á!iothi pou. Menes co mplicad o ha-
u.. Lo d educe de an (p riva l iv .. m) i énai. br ía si do, como sug ie re Mér idi cr. der ivar lo d e po/1l1 (ap ónl(J5).
428 ]) J~lOGOS CRÁTI LO 429

s en te aqu e llo q ue se a nhe laba; y c ua ndo e llo no está prc- toda vía q uiero exp licaraná n ke (necesidad), pu es to q ue va
sen te , e s to m is mo ~e lla mó po thos. 1I con t inuación de éstos, y hekoú sion (vol un tario).
En c ua n to a Eros, dad oq ue e se in sin úa desde fue ra. Heka úsion es . 10 que cede » (so eikon) y no of rece re-
b (eisrhei éxothen¡ y es un a corr ten te no co nna t ural al que s iste nci a . Co mo digo, es ta ría rep resent ado por este nom-
la po see, s ino in ducida a t ra vés de los ojos , po r esta ra- b re, que está e n confo rmi dad con la «voluntad- (boullJ,
zó n, a part ir de eisrhe in, fue llamad a ant ig ua mente esros • lo que cede a l movim ie nto . {to ei kon t ói i órüi]: Lo anan-
(p ues e m pleába mo s o e n vez de o). y ahora se llama éros kaíon. po r el cont ra rio. y lo que ofrece resistenc ia , sien-
por el cambio és te de o po r o 111 , do co ntra r io a la bo úlésis, ser ia lo refere n te a l error y a
Pe ro, ¿ te q ueda algo a ún que pod a mo s exami na r? la ignoran ci a. y se asemeja a u n «viaje por las a ngostu-
H U M . - ¿ Qué te parece n d oxa (opi n ión) y sus se rne- ras . (ánk e parda), p uest o qu e éstas dificult a n el ca m ina r e
jantes? po r se r di fícil es, ásperas y escab rosas. Qui zás. pues, to-
Soc. - Dox a, de sde Juego, ha recibido este no m bre, o mó de aq uí su no m bre , porque se asemeja a u n viaje por
bien por la • perse cución . (dl'oxis) que el alma recorre en lo a ngos to. Pero, mient ras no s qu eden fuerza s, no las de-
e s u asechanza por s a be r cómo son las cosas, o bien por el jemos decaer. Conque no decaigas tú y sigue interrogando.
disparo de l earco; (Ióx o u). Per o parece, más bien, es to ú l- H UM , _ Te pregunto ya por lo más importante y be- 42 10.
timo. Oiésis (c reenci a), cien amente, conc ue rda con ello, 110, la «ve rda d - (aU rheia) y la efalseda d - (p5eüdos). «el se r e
pues parece manifestar el ca m in a r u. del alma hacia to- no ó n) y, precisamente, aq uello sobre lo que versa nues-
da co sa -por ver cómo es cada uno de los seres-o lo m is- t ra conve rsación . el ..nomb re . (ó n o m a): ¿ po r qu é tiene es-
mo q ue ta mbién bou /t (decis ión) de sig na, de algu na ma- te nom bre ?
ne ra , el «d ispa ros (bo /t) y bo úie sthai s ign ifica • te nder a . Soc. _ Bie n. ¿ Hay algo a lo q ue llames . invest iga r .
(ephÉeslhai), igual que bouleúesrhai (de cid ir ). (m a íest ll a ijJ
Tod os es to~ no mbres, sé qu ito de doxa . pa recen se r re- H ERM . - Sí, a ..buscar. (zetein).
prese n laci one ' de bote (d is paro) lo mi sm o q ue, a s u vez, Soc. _ Pues parece un no m b re cont racto a partir de
s u contra rio aboulía pa rece s inó n imo de atychia (ye r ro), una oración , la c ua l sign ifica que ó noma es e l «se r » (6 n)
e? la medida en que no a lca nza ni obtiene aqu ello a lo que sob re el que preci same nt e se invest iga. Aunque lo reco-
di s paraba, aque llo q ue de seaba o deliberaba, ni aquell o noc e r ias mejo r e n aq uello que llama mos onomaslón (nom -
a lo que te ndía. bra ble): aq uí s ign ifica a bier t amente qu e ello es ..el se r del
d H ER M. - Sóc rates, me parece que es tos nom bres los q ue hay un a invest igació n . (cm ho ú m ásma es üni
sacas ya a bo r botones. En c ua nto a aletheía (ve r dad), también se ha cont ra jo b
SÓe. - Es q ue ya corro ,'''' ha cia la me ta . Ahora bien , do igu a l que los otros , pues parece q ue con es ta locución
se cal ifica al movimie nto di vino del ser, a la ve rd ad en ta n-
. JI En e l tex to s e dic e . ou en ~ez de ii_, pe ro ver n. 104.
u . Gr. Q¡5i s, hdpax Its tJmt'lo" ac u ñado aqu í por Pla lón de riva ndo-
to que ..es u n viaje d ivino. {the ía ousa ále). Mie ntras que
lu de l fu tu ro de phérO(O{5iJ~ e imp líci ta me nt e re la cio nad o c on Oi51ÓS pse ü.dos es lo cont rario de l mo vimiento. De n ue vo, pu es,
(!lec ha). se nos prese nta c ub ie r to de oprobios 10 qu e re tien e y c bli-
' 4(1 Admil im08 con Bu rncl ia lec tu ra Ihé6(co rrecc ión d e Iheói de la ga a desca n sa r: se aseme ja a los " dormidos » (katheú dou-
vulg.). Hay que forza r mucho el sig nlf tca do de I h eÓ5 para oblene r un sen .
tid o (cE. ela ins pira ción de 111 d ivin ida d », en Mérid icr) .
r
43 0 DIÁLO GOS CRÁTILO 43 1

si), a unque la adició n de ps ocult a el s ignificado del Sóc . - Lo que digo es m uy razo n a ble, cla ro . Sin em -
nom bre. bargo, no c reo que nuestra causa'" admit a excusas.
E l «ser" (ón) - y la «esencia» (ousia)- se aj us ta n a la ¡Ha y que a nalizarlo t en azmente ! Pensemos, pu es: s i al-
verdad con to mar una i: en efec to, sígnifíca « lo qu e se mue- guien pregun t ara, un a y otra vez, por aq uellas locucion es e
c ve » (ión), así como el «no -se r » (ou k ón) sign ific a "l o que con las que se e xp resa u n nombre y, a su vez, por aq ue-
no se m ueve» (ouk ión) 141 como t a mbién lo lla man llos elementos con los que se expresa un a lo cución y no
algunos . deja ra de h acerl o , ¿no es ac aso in evi ta ble que el que con -
HERM . - ¡E sto s í que me pare ce, Sócrates, que lo h as tes ta te r m ine por call arse ?
destrozado 142 como u n hombre! Pero si a lguie n te Ptc- HERM. - Pienso que si.
gun tara, en relación co n ion, rhéon y doün, cuál es la exac- Soc. - ¿ Ento nces cuándo será razonab le que te rmine 422 a
titud de est os nombres 141••• por call arse el que contesta ? ¿N o será cuando llegu e a los
S Oco- .•.«¿qué le contestaríamos ?» ¿Quieres de ci r es- nombres que son como los eleme ntos p rimarios l 4~ de las
to, no ? dem ás expresio nes o nombres? Y es que és tos, los que tie -
HERM. - De sde lu ego. n en ta l cond ición, ju sto es que ya no pa rezca n compone r-
soc. - Buen o, ha ce un momento hemos encontrado un se de otros nombres. Por ejemplo, decí amos h ace un ins-
med io de que parecie ra que nuest ra res puesta tenía algún ta nte que agathón se com po ne de agastón y thoón; y, qui-
valor. zá, podríamos afi rmar que thoón se com pone de otros y
HERM. - ¿Cuál ? aquéllos de otr os. Pe ro cuan do eve ntualmente lleguemos b
Sóc. - Deci r que es ex t ranjero aquello que descono- a lo qu e ya no se co m po ne de otros nombres, po dremos
cemos. Podrí a se r, quizás, q ue alguno de ellos lo sea en afi rmar con razón que no s enc ontramos en el ele mento
d ve rd ad, o podria ser qu e los nombres pri mit ivos sean im- p ri m a ri o y que ya no tenem os que referirlo a ot r os
pos ib les de in vesti ga r debido a su a ntigüe da d. Y es que nombres.
con tanto revolver los nombres, no se ría extrai'io que nues- HERM. - Pa ra mi que ti en es razón.
t ra a nt igua lengu a, compa rada con la de hoy , e n nada di - Soc. - ¿Acas o, entonces, preci samen te es tos nomb res
fiera de una lengua bárba ra. por los que me preguntabas son los no mbres-e le mentos
H ERM. - Desde lu ego que no dices n ad a fuera de y hay que a naliza r ya su exactitud por algún ot ro medio?
p ropósito. H ERM. - Es po si ble.
Soc. - ¡Y mu y po sible, He r mógen es! Des de luego pa -
rece qu e todos los a nterio res se r et rot rae n a és tos. Mas e
si ello es as í, como a mí me pa re ce, acom pé ñame en el aná-
.. , Se refi e re a la te rma jo ni a ou k í de la nega ción enfátic a ouch í.
"z En gr., diakekro likén ai. ve rbo perteneciente al voca b ula rio del
g im nasio . aunq ue sólo es tá doc u ment ado en EURfpJDES (Cíclo pe 180) con ,.. En gr .. agtn. Locuc ión p rov er bial que h ace alu sió n a las exc usas
sentido obsceno . prese ntadas por un test igo pa ra no acud ir a l t ribunal (cf. A RJSTÓ F ANES ,
lO) La Interve nción de Hermógenes impone aquí un giro d eci sivo a l Acam ienses 392).
d iálogo; gi ro que está mareadoest ilis ticame nte por la violenta in terrup. '.1 A part ir de aq uí se le s lla mará nombres p rima rios (p rlila) a los
ció n de Sócra tes : a conun uación , se pasa al lema d e los elem e n to s pri- ele mentos y sec un darios (hYslera). a los d eri va do s. Es inexac to tra du cir
ma rio s y a la teorla de la m imesis. prlila por .primiti vos », como ha ce Mé ri dier .
4 32 DI" I-OG O S CRÁ TI l.O 4 33

lis is no va ya yo a desva ria r c uand o exponga cuál ti en e que ba ilo a la ca r re ra, o c ua lq u ie r o tro a nima l, sa be s bien q ue
se r la exacti t ud de los nom bres primarios. a decua ríamos n uest ros cue rpos y forma s a las de a q ué llos.
HU M. - Sólo tienes que ha bla r, que yo co m pa r ti r é t u H E RM . - Es inevit able que se a c o mo dices, c reo yo.
a ná lis is hasta e l lím ite de m is fue rz as. Soc. - Creo que ha brí a una manifestación de a lgo
SOCo- Bien . Cr eo q ue tam bi én tu convienes co nm igo cua ndo el cuerpo, se gún pa rece, im it ara aquello q ue pre- b
en qu e es única la ex act itud d e todo no mbre, tanto si es te ndie r a m anifestar.
primario co mo se cu ndario. y que nin gu no de ellos es más HERM . - S í.
no mbre q ue los otros. SOCo- ¿ y c ua ndo qu e remos m a nife st ar a lgo co n la
lI ER M. - De sde lu e go . voz, la le ng ua o la boca ? ¿ Acaso lo q ue result a de e llo no
d SOC. - De o t ro la do. la exa c titud de lo s nombres que es una m a nifestació n de ca da cosa c ua ndo se ha ce un a imi-
acabamos de re co rre r pa recl a 1. . co nsistir en r e vel a r có- ta ció n de lo q ue sea po r estos m edios ?
mo es ca da uno de lo s se res. H Ek M . - Pien so qu e es fo rzoso,
H EkM. - ¿Cóm o no ? Scc . - Ento nces , se gún parece, el no m br e es u na tmi-
56( . - Por consigu iente , ta n to los nombre p rima r ios taci ón co n la voz de aq ue llo que se im ita; y e l im ita do r
co mo los sec und a ri os ha n de te ne r, ni más n i m enos, es te nombra co n su voz lo q ue im ita.
carác te r, si es qu e son nom bres. H ERM. - Pienso que sí.
H ERM. - De sde lu ego . Soc . - ¡No, po r Zeus! A mí, s in em bar go, a m igo mí o, e
soc. - Pero los secun darios, se gún p a rece, e ran ca pa- no m e parece qu e es té bien dicho dé'I todo.
ce s de con seguirl o po r m edi a ción d e los primarios. H ERM . -¿ Cómo es eso ?
H EkM . - Cla ro. Soc. - No s ve rt amos o bliga dos a adm it ir qu e lo s qu e
Soc. - Bien. Entonces, lo s p r im arios , detrás de los im ita n a las o vejas, los ga llo s u o t ros a ni m a les está n nomo
c ua les no ha y ningún o t ro en a bsolut o, ¿ de qu é m ane r a b rando a q uello qu e im ita n.
e nos revel a rán lo mejor po s ib le a los se re s , si es que h an H ERM. - Tie nes r a zón .
de se r nom bres? Soc. - ¿ y te parece que ello es tá b ien ?
Con tés ta me a esto: si no tuvié ramos voz ni lengu a y nos H ERM . - No. no . ¿ Pe ro qu é cla se de im ita ció n se ri a el
qui siéramos man ife star r ec íproc a m ente las cosas, laca· nombre, Sócra tes ?
so no intenta rí a mos, como ahora Jos so r dos, manifest a r- SOC. - En p ri me r lu ga r, no lo es, según m i opinión, si
la s co n las manos, la ca beza y e l r esto del c ue r po? im itamos la s co sa s lo m ismo q ue im ita m os con la músi-
H E RM . - ¿ Pues có mo s i no, Sóc rates ? ca, por más que ta m b ién aquí lo hagamos con la voz. En d
4 23a SOC. - Si quisi éramos , pi enso yo, m an ifes tar lo alto y seg undo luga r. no po rq ue im item os t a m bié n nosot ros lo
lo lige ro, levantaría mos la m a no ha cia e l ci c lo im ita ndo q ue im ita la m ús ica c reo-yo q ue es te mos no mbrando. y
la natu raleza m ism a de la cosa; y s i lo de a bajo o lo me r efi e ro a lo s igu ien te: ¿ tie ne n la s c os as, ca da u na de
pesa do 141 , ha ci a la t ierra. S i qu is iéra mo s ind ica r un ca. e llas , sonido y form a, y la m a yoría. a l m enos colo r ?
H E RM. - Desde lu ego.

106 Lit. «q uer ta - . c ua l el ve rbo a( re in s ign ific a <s ubir- en la pri mera fr ase y <baj ar . en la
)4¡ Se en tiende, «baja ría mos la man o • . Ha y UIl zeugma en vir tud del segund a.
61. - 28
434 lllÁ LOGOS C RÁT Il.O 435
Soc. - Entonce s, si acaso se imita n estas prop iedades, tos, lu ego el de la s s íla bas, y ya de es ta form a , pero no a no
el arte que a ba rca ta les imitaci on es no parece que se a el les, llega n en su anális is ha sta los r nmos-c-?
a r te de nom bra r. Será n, más b ien, la m úsica y la pintura, H E RM. - Si.
¿no? Soc. - De la mi sma forma, ¿no te ndremos tambié n no-
H ERM . -Sí. sot ros que di sti nguir. primero, las vocales y, después. en-
e 56c. _ . ¿ y qu é me d ices de esto ot ro ? ¿ No le pa rece tre la s de más según los gé neros, la s co nsona nles y m uda s
que cada cosa ticn e una esencia lo m is mo que u n colo r (as¡ las llaman los e nt e nd idos), y ta m bié n las qu e no son
y c ua n t as p ropiedade s ci tá ba mos hace un insta nte ? Y a n- voc a les pe ro ta mp oco m udas ''' ? ¿ Y, den t ro de la s mis -
le s q ue nad a . ¿el co lo r mismo y la vo z no ti ene cada uno mas voc a les. c ua nt os géne ros ha ya di stintos e nt re s í? Y d
s u ese nc ia. lo mi s mo que lodo c uanto me rece la predica- c ua ndo ha ya mos d istingu ido b ien todos los se res ,... a lo s
c ió n de se r? qu e ha y q ue im po ner nombres. ver s i ex is te a lgo a lo que
H I::RM. - Pien so que sí. lodos se re trotraen, lo mi s mo que ele me ntos prim a ri os,
Soc. - ¿ Pues qu é? ¿Si alg u ie n pudie ra im it a r este mis- a pa r t ir de lo s c uales sea posi ble contem pla rl os y ver s i
mo , la esenc ia d e cada co sa, con le tra s y sil a bas, no mani- hay e n ellos gén eros de la misma manera q ue e n los ele-
fes ta r ía aca so lo qu e es cada cosa? ¿O no es así ? me n to s. Una vez que hayamos an ali zado bien todo es to,
424 a H f:RM . - De sd e lu ego. ha y qu e sabe r a plica r cada uno según s u sim ilitud, ya sea
Soc . - ¿ y cómo llama rl as a l qu e es capaz de esto ? Lo que ha ya que a p lic a r uno a uno o bien com bina n do muo
mi sm o que de los an te r iores a un o lo llamabas músico y chos. Lo mi sm o que los pintores, cu ando qu ieren saca r un
a l ot ro p in tor, ¿cómo llamaría s a éste ? pareci do, un as veces aplican solam ente pú r pu ra y. otras.
H E Rid . - Te ngo pa ra mí, Sócrate s, que esto es lo que cua lqu ier ot ro pigmento, pero a veces mezcla n m uc hos (co-. e
a nda mo s busc a ndo hace t iempo: qu e éste es el nominad or. mo cuando p repa ran una fi gu ra humana o algo pareci do
Soc. - Luego s i es to es cier to. ¿ habrá qu e in ves tiga r según, pie nso yo. les pa re zca q ue la figu ra nec es ita ca da
ya , como es lógico, sobre los nombres por los que tú me pigmento). asl tambi én nosotros aplica remos los ele me n-
b pregun tabas - rhal, íenai , sc hés is-· s i es verda d o na que l OS a las co sas, bien uno a uno (el q ue nos pa rezca que
ca pt an e l se r po r med io de le t ras y s íla bas hast a el punto nec esitan], o varios, forman do lo que llaman síla bas y, des-
de imita r su ese ncia ? pu é s, com bina ndo s íla bas de la s que se com pone n tanto
H ERM . - Desd e luego . no m bres como verbos. Y de nue vo, a partir de los no mo 425l.l
Soc. - ¡ Ea, pu es! Veamos e ntonces si és tos son los úni- bres y lo s ve rbos com pond re mos ya u n todo gran de y he r-
cos nom b res prim a r ios o ha y m uc hos o t ros . mo so . Lo mismo que ellos com ponía n una pintu ra con el
H ERM . - Creo yo que ha y ot ros.
Soc . - Parece lóg ico . ¿ Pe ro c uá l se r ía la clas ificación ,•• er., ta mbié n, n . 34. S ~gún esta clasificación simila r a la ..te File·
de la que pa r t e el imitad or pa ra imitar ? Dado que la irni - ba 181>, e, Pla tón di.lin gue ent re: a) so nor as (pho nte n la), esto es, voca les;
raci ón de la esenci a se hace preci samente por me di o de b) las q ue carecen d e so n ido y ruid o (áphon a ka! áph lh on¡:a), i. e.. ce ns e-
nant es, y eJ la s Que no son so noras pe ro «pa rt lc tpa n d e u n cie rto ruido >
sílabas y le t ras, ¿ no se rá lo m ás acert ado dis ti nguir , pr-i- (p h th óngau met écho n ta tín ós. cf., en Pi/e bo, lo cocit.) , i. e., las sonantes ,
e me ro, los ele mentos - lo m ism o qu e quienes se ded ica n l" En fo rm a muy b ru sca se introduce equ¡ la exigencia de una ele-
a los ritmos distingu en, prime ro, el valor de los ele rnen- síficacíón paralel a de la rea lidad, a la cua l debe co rresponder la de los
elem ento s.
436 CRÁTI LO 437

arte pic tórica , asl nosotros un d iscu rso con el arte ono- que prefieras que, como los t ragediógrafos c ua ndo se en-
má sti c a . re tó r ica o como q u ie ra que se a . O , mejor dicho, cuentra n s in salid a rec urren a los d ios e s leva ntá ndolos
nosot ros no (me he de jado a r rast ra r po r la s palabras), pues en máquinas I ~ , a s í tambié n no sotros no s de mo s por ven-
ya los a nt iguo s lo com pu s ieron lal como a hora s u bs ist e. cido s alega ndo que los nomb res p r ima ri os los es tableci e-
Nue s t ra obli gaci ón . s i es qu e vamos a sa be r a nalizarlo lo- ron los dioses y, po r eso, so n exactos. ¿Se rá és te n ues t ro e
b do confo r me a té c nica, es tra zar esta s di s t inc iones y ver argume nto más poderoso ? ¿O aque l otro de que los he-
s i lo s no m bres primarios y los secunda r ios si guen est as mo s he redado de los bárbaros y éstos son más antiguos
no rm a s o no. que nosot r os ? ¿O que es im po s ible analizarlos. deb ido a 426a
Cont in ua r de a ira fo r ma me te mo qu e sea vano y fue - s u a nt igüe dad. lo mi smo qu e los bárbaros ? Todas éstas
ra de vereda. a migo He r mógen es. seria n evas ivas -y muy astutas. por ci erto-e, s i no qu e-
H ERM . - [Por Zeus! Oui zá si, Sóc rates. re mos dar razón de la exactitud de los no m b re s prima-
soc. - ¿ Y qu é ? ¿Cooflas e n Iu propia capaci dad pa ra rios. Sin e m ba rgo, s i a lgu ie n. de una form a u ot ra, des eo-
rea liza r ta les distincione s ? Porque yo, no. noce la exact it ud de los nom bres p r ima r ios, es impos ible
H .l::RM. - E ntonces y o m uc ho menos. que conozca la de los se cundarios. p ues éstos se e xplican
Soc . - Deje mc slo, pues. l O prefieres qu e lo sigamo s forzosamen te a pa rtir de aquéllos, sob re los c ua les nada
int ent a ndo en la medida de nuestras fuerzas. a unque sea- sa be. Conque res u lta obvio que qu ie n sostiene ser enten -
e mas capaces de visl umbra r só lo un poqui to ? Lo mi smo dido e n lo s sec unda ri os, t iene que ser ca paz de di s er ta r b
que hace un mo mento 1M p re veníamos a los di o ses de de la for ma más clara pos ible so bre los primarios, o bien
que, en completa ignorancia de la verdad, conjet urába mos tener conciencia de que ta mb ién sobre los se cunda r ios d i-
la s o pin iones de Jos hombres sobre e llos , as í a hora pode- ce maj ad ería s "J. ¿ Lo crees t ú de otra forma ?
mos pro seguir dici é ndonos a no sot ro s mi smos q ue, si nos I-I E RM . - En a bs oluto, Sócrates.
fuera preci so. bien a no sot ro s o a c ualqu ie r otro. clasifi- soc. - Pu es bien , lo q ue yo te ngo oído sobre los nom-
carlos, habría q ue clasifica rlos así. Ello es que te ndrem os b res primarios me parec e com p le ta men te inso le nte y ri -
que ocu pa rnos de és tos, según decimos, e n la medi da de d icu lo . Co n todo, te lo comu nica ré s i qu ieres. Mas s i tú
nu est ras fue rza s. ¿Te parece bien? ¿Cómo lo ent iendes tú ? d ispones d e algo mejor a lo que a sirte. int enta hace r me
H E RM . - Me pa rece pe rfec ta me nte bie n. tam bié n a m i pa r tic ipe de ello.
d Soc. - Es man ifies tame nt e r id íc ulo m. He rmógen es
- pie nso yo-r-, q ue las cos as ha ya n de revel a rse medi an te 111 Se refie re a l céle b re recu rso de los tr uged jógre fos a l deu5 eJl me-
chi llO. S in e mba rgo , el d ios no s uele resol ve r desde la má quin a con flk tl1
let ras y silab as. Sin embargo , es ine vitab le, pues no d is-
a lgu no. S imp leme n te , si ne pa ra ce rra r un a ob ra . c uyo ( o nm eto ya es ta
ponemo s de nada mej o r que esto a lo que po damos recu- res u<:h o , co n Una p ro yecció n ha cia el plano di vino . e l . A. SPIRA , Unltr5U·
rrir sob re la verdad de tos nom bres p r ima ri os. A me nos c!lungel1 ~u '" . deu5 eJl ",ac!limJ> bei S opho cles u nd Eu ripide5, Kall mun z,
19óO.
ISIJ cr. 40 \ a. 1'1 P" . " a l esce p tici sm o de SóCrat es, ant es se ña la do, es o bvio qu e
111 Desd e e l p rincip io , Sócrates se m ues tra escé p tico sob re la va lí- ya no está disp ues to a seg u ir e l juego, recha za co mo evas ivas todo . los
dcz d e la tec r ta mim étic a qu e aca ba d e expo ner co mo fu nda me n to e t éc- procedi m ientos qu e é l mi smo ha segu ido hasta aquí en las eti mo logla.
n ico _ de l n atu rali smo (d., tam bi én, 426b) . Crátilo , si n em bargo, la ace po y ya no Se mu e s tra iró nico con lo s sofis ta. (a los qu e aqu í a lu de veh, da·
ta rá s m ve r ha co ns ec ue ncia s negat ivas de ésta ac eptació n. me n te), s in o . e ve ro y ha sta despect ivo.
4J8 DIÁLOGOS CRÁTILO 439
HERM. - Lo haré. Conque anímate a hablar. y de la i, a su vez, para expresar t o do lo sutil, lo que
e 56c. - Para em peza r , me parece que la r es como el p reci samente podría a t r a ves arlo tod o mejor. Por ello r e-
instrumento de todo «movimiento »(kintseos), del que tam- produce la acción de «move r se » (iénai) y «la nza rs e » thiest - 427a
poco hemos e xplic ado el nombre - pe ro está claro que sig- hai) por m edio de la i, Lo mismo que con la ph , la ps, la
nifica «im pu lso» (hésis), pues antiguamente no empleába- s y la z, siendo le t r as co n aspiración, reproduce fo rma n-
mos e sino e 114. En cuanto a su inicio, procede de kieín, do su s no m bres c o n e lla s todo lo qu e es así: lo «trto»
no m b r e de otro d ia lec to, que significa «marchar» , Pues (psychr6n), lo que «hierve » (zéon), el «agit arse » (seíe sthai)
bien, s i se busca su antiguo nombre en c onso na nc ia con y, en general, la «a git aci ón » [seismos]. Cuando q u ie r e.
nuestra lengua, se llamaría c orr ecta m ent e hésis. En la ac - pues, im ita r lo vento so, el que pone los nombres par-ece
tu alidad se de nomina k ín ésís como consecuencia de l dia- aplicar t a les letras e n la mayoría de los ca sos.
lec tal k iein, de la inserción de n y el cambio por e, pero De otro lado. parece que ha co nside r a do útil se r virs e
d habría q ue llamarlo ki einesís. Stásis (reposo), por su par· de la ca paci da d de compr ensión y r et ención de la le ngua b
te, e s la negación d el movimiento, aunque, por ornamen- en d y t para reproducir la «atadura » (desm 6s) y el «repo-
tación . ha t om a do la forma stásis- 11I . so» (stásis). Y viendo que la lengu a resba la, sobre todo, en
Así pues, el elemento r, se gún digo. le ha parecido al la l. po r semejanza dio el nombre a la s cosas «lisas» leía)
que pone los nom bres un buen instrumento del movimien- y al mi smo verbo «re sbalar» (oli sthánein), así como a
to en orden a a similarlos a és te: y es que e n muchos casos lo «gr a s ien to » (liparón) y lo «viscoso » (kollódes). Y co -
se s irve del mismo para expresarlo. En primer luga r , en mo la g puede c on ten e r a la le ngua al deslizarse ésta, r e-
el mismo verbo rhetn y en rhoi se imita el movimiento con produjo a sí lo «pegajoso » (glíschron) lo «dulce » (glyky) y
e e sta le tra. Después. en trómos (temblor). en trach » (rápi- lo «glutinoso » (gloi ódes).
do) y. ulteriormente, en verbos c om o k roú ein (go lpear). Percibiendo, por otra parte , la interiorid ad del sonido e
th raúein (romper), ereik ein (desgarrar), thryptein (despie- en n, puso los nombres de «dentro» (éndon) y «las interio-
za r ). ke rm atíze in (desmenuzar), rhymbeín (voltear): todos ridades» (ta en t6s), con la intención de imitar los hecho s
é stos los as emeja I~ a tr a vé s de la r. Y es que veía. según con la s letras.
imagino, que en é sta la lengua no se detiene para nada, La a se la adjudicó a lo «gr a nde» (m égas) y la e a la e x-
sino que se a git a en grado sumo; por e sto, cr eo yo que se t en sión (m ekos) porque son grandes es ta s letr a s . Y c om o
ha servido de ella con este fin. necesitaba la o como símbolo para lo «r ed ond o » (gón -
114 El texto dice e í, pe ro d . n. 104. gylon), se sirvió so b r e todo de ésta para form ar la m ezcla
m MI<RJD IER (PlalOll...• vol. 1. In tro ducción, pág. 24) seña la lo descon- del nombre 1!1.
cert ante de es te pa rénte sis qu e va desde «pero es tá claro.... hasta .la
for ma ssásís»: a) vuel ve a em plea r todos lo s pro cedi mientos qu e aca ba m HORN señala (pág. 50) .el abs u rdo > de basar se en la form a de lo s
de rec ha zar; b) int roduce. a propósito de r, que es símbolo d el mov imi en- signu s y no en el so nido, cu mu si la escritura fUera anrcrfor al len guaje;
to, una serie de nombres que Jo .~ignifícan (k("esis, hésis. kleirt) sin ten er a bsurdo a gravad o. según él. pu r el ci rcu lo que vida est a últ ima fr ase .
la r. M. Dies sugier e qu e Pla tón puede esta r pensando en la pa la b ra pha- S in embargo. el q ue emp lee la palab ra «le tr as . (grámm%). en vez de so-
rá. pero, au n así. el pasaje sigue sie nd o d esconcerta nte . Pcr otra pa rte, " id os. no deb e extra ñar en u na tase lan pr irllili n l de' la lillgü ísl ic" a. Adc-
no es lóg ico qu e Só c rates diga. a conttnuacion, que el no min a do r se s ir- m ás. 1" lo rma redonda de la o puede referi rse a la furm a d e la boc a al
ve d e la r pa ra expresa r el movimiento en mu chos casos. pron unciar la y la a. e no son más _gra ndes» que cua lq uie r ulra letr a (cl.
I!. Se ent iende «al movim ien to • . MI<RJD1ER. P!alon.... yel. l. Introd ucci ón. págs . 25·26).
440 DIÁLOGOS

Es evidente qu e el legisl ad or re dujo también la s dem ás


noc iones a le t r a s y silabas, cr e an d o un s ig no y u n nom o
r CRÁTILO

Soc . _ Po r s upuesto, Crátilo, qu e ni yo m ismo po d ría


ga ra n t iza r nada d e lo que he ex pues to . Lo he ana lizado
44 1

b re pa ra cada uno d e lo s se res, y. a pa r tir de aquí. com- tal como se me iba ocu rr ie ndo co n el co nc u rso de He rm ó-
puso el resto medi a nte la imit aci ón con es tos mis mos ge nes; de for ma q ue, en gracia a esto. a nímate a ha bla r,
e lem e ntos. s i t ienes al go mejo r. e n la idea de q ue yo lo acep ta ré. Y. b
d És ta es , Hermóge nes. mi op inión sobre la exactit ud de e n ve rda d , no me e xt ra ña ría que pudieras deci r a lgo me-
los nomb res. a men os que aq u í. Crátilo, te nga ot ra cosa jo r que esto, pues tengo la im p resió n de qu e lo ha s est u-
qu e decir. d iad o person a lme n te y que ha s aprendido de otros. Po r
H ERM. - ¡Cla ro que sí. Sócrates! Muc has vece s Cr áti- cons iguie nte. s i dices a lgo mejor, ya puedes inscribirme
lo me pone e n a pr ie tos. co mo decía antes, afi rmando que tambié n a mi como uno de tu s d iscípu los sobre la exacti-
ha y una e xac ti t ud de los nombres, pero sin decir clara- tud de los nombres.
mente de qu é cla se. De es ta forma no puedo sa be r si . ca - CkÁT . _ ¡Claro que sí, Sócrates! Como tú d ices. me he
da vez qu e habla sobre el te ma, lo ha ce tan poco claro vo- ocupado de estos temas y, q uiz ás . podrí a tomar te como
e luntaria O involunta riamen te. Conque ahora, Cr átilo, con - a lu m no. Con lodo, temo no va ya a re sulta r al revés. pue s e
fiesa de la nt e de Sóc rat es s i te sa tis fac e la forma en que se me ha oc u rrido citarte las palabras qu e Aqu iles dirige
ést e habla sobre los nombres o s i ti enes tú algo mej or que a Aya x en Las Plegarias. Dic e así:
decir. Y s i lo t ie nes , expó nlc para que aprendas de Sócra- Áyax Tela monio del linaje de Zeu s, caudillo de pueblos.
te s, o b ien no s instruya s a los do s u'. parécem e que has dicho tod o co nforme a mi ánimo ,....
CRÁT. - ¿Cómo. He rm ógene s ? ¿Te imaginas que es fá-
cil apre nd er o enseñar tan rápidamen te c ualqu ier co sa y Tamb ié n tú, Sócrates. parece que ha s recitado t u ora-
me no s aún és ta que pa rece d e las má s im portantes ? c ulo e n confonn idad con m i pensa m iento, ya se a qu e te
428a H ERM. - [No , por Zeu s, desde luego q ue no ! Pe ro creo ha ya s ins pira do e n Eut ifró n o qu e te posea de sde hace
que está bie n lo que 'dice Hes íod o , que si u no va de po- t iem po a lguna otra Mu sa sin que tú lo adv ierta s.
s it an do un poco so bre otro poc o. ello resulta be ne- Soc. _ ¡Mi bue n a migo Crát ilo ! Incluso yo m is mo es- d
fici oso IW . Conq ue s i e res ca paz de aporta r algo más. toy asom brado. hace tie m po . de mi p ropia sa bidu ría y des-
por poc o q ue sea, no cejes y haznos un fa vo r a Sócrates co nfío de ella . Po r e nde, c reo qu e hay que vo lve r a ana li-
aq u í presen te y a mí -c.pues de bes. za r mis pa labras, pues lo m as od ioso es dej a rse enga ña r
po r u no m ismo. Y c ua ndo el que q uie re engaña r te no se
1'501 Ha s la el momen to . e nlo lilo h a ma n tenido un inelegan te y cbst t- a leja ni u n poquito, si no que está s iempre co ntigo. ¿cómo
nad o s ilencio (rel,;o rde rno s s u de ,gan a ¡n ida l de hal,;er a Sócra tes pa rtí- no va a se r temib le ? Ha y que vo lve r la a te nció n u na yot ra
ci pe d e s u l,;o nve rsaci6n co n Hermógen es, 383 a). Ahora, tan to Sóc rates
com o He rmó gen es. le menan a h a b lar; Sócrates. más ve la damente, con
vez. segú n parece. a lo a n tes dic ho e intenta r lo del poe ta :
el objet o de de smon ta r la teo ría naturali sta. co mo se verá; la s pa labras
de He rmógene s, más ingenuo y ab ier to , entroncan co n s u p r im era in te r.
ven cién ante Sóc ra te s. "'0 Par ece que la d ivis ión en Can tos de la l/iuda y Odiua no e S a no
' l" Ct. Trabajos y Dlas 361·62: <p ues si añ ades poc o sob re poco y ha· terio r a la t poc a a lejan d rma. Ant es de es ta é poca se suel en c itar por los
ces esto co n fr ecue ncia , lo POC(l a l pun to se converti rá en muc ho _ (tra d. nomb re s de ep isod ios má s o men os exten sos , co mo Las Plega rlas. La CÓ·
de AUREUO P ~. R Il /. JIM ~ N IlI, en el vol. 13 de esta colecció n). lera, 1,os l ura nte nto s, etc .
r
442 DIÁLOG OS CRÁTi l O 443

m ir ar « 3 un tiem po hacia a de la nte y hac ia a trás» 101. Vea. te no mb re , habida c ue nta de que nada ti en e que ver con
e mos. pue s , ahora m is mo lo q ue hem o s dejado definido. La la progenie de Herme s ? ¿O que sí lo ti ene, pe ro no de foro
exactitud del nom bre es - decimo s- aque lla que nos rna- ma co r re c ta e n abso lu to?
n ifie ste c uá l es la cosa. ¿ Diremos q ue es ta definición es C RÁT. _ Yo o pino, Sóc r a tes, que ni s iq u iera lo t iene ,
s ufic ie n te ? sólo lo par ece, y que este es el no m b re de ot ro, de a quel
CRÁT. - A m í, Sócrates, me parece que por com p leto. a q u ie n corresponda ta mbién tal natura leza.
SOC. - ¿ y los no m bre s se d icen con vis ta s a la Scc. _ ¿ Aca so tampoco se habla fa lsa me nte c uando se
ins trucci ón ? afirma q ue e l es He rmó gene s ? Pue s te mo que no se a post -
CRÁT. - E xa ctamen te . ble ni s iq uie ra afirmar q ue és te es He rmóge nes , si no lo es.
Soc . - ¿ Dire mos. e nto nces, q ue é s ta e s un arte y que CRÁT. - ¿ A que te r efie re s ?
hay arte sa nos de e lla? SOC . _ ¿ Es q ue tu afirmación s ign if ica que no e s pos t- d
·e RAT. - Ex ac ta mente. bl e , e n abso luto, hablar fal samen te ,e,l ? Son much o s los
SOCo- ¿Qu i én es? que lo sost ie ne n, am igo Crátilo, tanto ahora co m o en el
4290 eRAT. - Los que t ú decías al principio , los legisladores. pasa do .
Soc. - Pues bien. ¿ diremos, por caso, que también este CkÁT , - ¿ Pue s cómo es posible, Só crate s, que si uno
a r t e se desarrolla en t re los homb res como la s demás o dice lo que d ice no diga lo que e s ? ¿O hablar falsamente
no ? Qui e ro decir lo sigu iente: ¿entre los pintore s. unos son no es acaso decir lo que no es ?
peores y o t ros mejores ? SOC . - Tu razonamiento es un tan to sutil para mí y pe-
C RÁT . - De sd e lu ego . r a mi ed ad, amigo. Sin embargo, dime só lo esto: ¿ piensas
SOco- ¿ Entonces los mejo re s hacen mejor sus obras que no es posible ha b la r fa lsame nte, pero sí a fir m a r co- t
-las pintur a s-e- y los ot ros, peor ? ¿ Y lo mismo los a r qu i- s as fal sas ?
te ctos , unos ha cen la s casas m á s bella s y o tros m á s fea s ? CIl.ÁT. - Creo que n i s iq u ie ra a firmar cosas fa lsa s .
CRÁT. -SI. Soc . _ ¿ Ni tampoco e nu nciar o sa lu da r 16J? Por eje m-
b SOco- ¿Ac a so, e n to nces, ta mbi én los legi sl ador es ha - p lo, s i a lg uie n se encuent ra co ntigo e n el ex t ranj ero, te
ce n s us propia s o b ras unos m á s bell a s y o t ros m á s fea s ? to m a de la m ano y d ice: «S alud, fo raste ro a tenie nse , He r-
CRÁT. - Opino que e sto ya no. mó gen es hijo de Esrnic ri ón - , ¿ lo diría e s te hom b re o lo
SOC. - ¿ Es q ue no te pare ce que , e ntre la s leye s, un a s a fi r ma rla o lo en u nciarla o te saluda rla así no a ti sino
so n mejore s y o tras peore s ? a Hermó gen es ? ¿ O a ningu no de los dos ?
CRÁT. - De ningun a manera. ( RÁT . _ Segú n mi opin ión , Sócrates, es te ho m bre pro-
SOco- ¿ Ent o nc es tod os los nombres e stán co rrecta- nunci aría e n vano esas pala b r as.
m e nte puestos?
CRÁT. - SI, a l menos todos los que so n nombre s. ,. 1 Sócra tes ya ha dejado demost rado. con tra He rmó genes . qu e se
S Oc o-¿Y, sobre lo que se habl aba ha ce un mcmcn - pued e ha b la r fal samente (d. 385b Y ss.). Aho ra tien e qu e volver a de mos-
e to? ¿ Direm os qu e aquí He r mó genes ni s iq ui e r a po see es- trarlo en cent ra de Crátilo basá ndos e, p reci sa men te, en la tec rte d" la
",(mi sis. Sobre los a ntig uos y mo dernos a los qu e se p uede ref e rir, en
ulti mo térmi no, la leor ia na tu rali st a (d . nue stra Introd.i:
,. , el. l/(a J a t 343. 101 S" ent iende, «fals a mente ».
444 D IÁLOGOS CRÁ TI LO 445

430a SOC. - Bie n, ha brá que contentarse con es to: ¿acaso soc. _ En tonce s, para que no ent a ble mos un comba - d
el que pronuncia esto lo pronuncia con ve rdad o con fa l- te verbal tú y yo que somos amigos, ac ép tame lo que te
sedad? , O parte de e llo con verda d y ot ra con fa lsedad ? d igo: es ta a t r ibución , amigo mí o, es la que yo lla mo co-
Esto se r ía s uficien te. r rect a en amba s imitaciones - la pintura y los nombres-c.
CRÁT. - Yo afirmaría q ue ta l in d ivid uo emi te un rui- y e n el caso de los nombres, ade más de correc ta. verda -
do y se m ueve inú til me nte, como s i algu ien agita ra y gol- de ra. En ca mbio, a la ot ra, la atri bución y asignación de
pea ra u na vasija de bronce. lo desigual. la cali fico como in correc ta y fa lsa c ua ndo se
Soc. - Vea mo s, pues, Crát ilo. si llega mos a a lgún t i. tra ta de no mb res.
po de acuerdo . ¿ No dirlas tú qu e el nom bre es un a cosa CRAT . _ ¡Cuidado, Sócrates, no vay a a se r q ue esto s u-
y a ira di st in ta aque llo de que es no m bre ? ceda co n la s pinturas - la a t ribu ción incorrec ta- ope ro e
e RAT. - Sí. no con lo s nomb res, sino q ue la co rrec ta sea s ie mpre
SÓ<:. - ¿ l uego co nvienes co nmigo en q ue el no m bre e s in evitable!
b un a imitación d e la cosa? soc. _ ¿Qué quieres deci r? ¿ En q ué se di stingu e ésta
e RÁT. - Más q ue nad a. d e aqué lla ? ¿ Acaso no es po si ble acercarse a un homb r~
Soc. -¿Entonces ta mbién admit es que las pintura s cualqu iera y decirle: eé ste es tu di bujo », y e nseña rl e, S I
so n, de una fo rma distinta. imitaciones de ci ert os obje tos? acaso, su re trato o, s i se terci a, el de u na mujer? Y con
CRÁT. - Si. - rnos tra rl e - qui ero de ci r _so meter a la percepción de s us
SOC. - Veamo s, pu es (q uizá no alcanzo a ver qué es ojos •.
exac ta mente lo qu e dices y po dría s llevar razón ): ¿es po- e RAl . - Desde lu ego.
s ib le a t r ibuir y asigna r a mbas clases de im it aciones SOC . _ ¿ y qu é si no s ace rca mos de nuevo a es te mis-
e- ta n to las pinturas como los nombres a ludidos- a la s mo hombre y le de cirnos: «este es tu nombres ? -c-pues, sin
cosas de la s que son imitaciones ? ¿O no ? duda . tamb ién e l nombre es una imitación como la pi n tu -
e CR AT. - Es posib le. ra. Me refi ero, pu es, a lo sigu ie nte: ¿no seria acaso pos.i- 4310
Soc. -Ant es qu e nada, e xamina esto ot ro: ¿ po dría b le d ecirle: «é st e es tu nomb re - oy de spués, so meter a la
a t r ib u irse a un hom bre la imagen de un hombre y a un a perce pc ión de su oído, s i acaso, la im ~taci 6n d e aquél. ~i­
m ujer la de u na m uje r e, igua lmente, e n los de más casos? ci endo que es un hom b re, o si se tercia . la de u na mu jer
eRAT. - Desd e luego. de la raza hum a na di ci endo que es u na mu je r?
Soc. - ¿ y lo cont rari o: el de un ho m b re a un a muje r . No pie nsas q ue e llo es posible y que sucede a vece s?
y el de un a m uj er a un homb re ? ~RAT. _ Es toy dispuest o, Sócra tes, a acep tarlo. Sea así.
C RÁT. - Tamb ién es to es posible. Sóc. _ y haces bie n, amigo mío , s i e llo es así. Ya no
Soc . -¿ Acaso son correc ta s amba s a tr ibuciones? ¿O hay que d iscutir e n a bsoluto sob re es to . Por cons ig uíen-
un a de ellas? te si h ay tal atribución tamb ién en es te pun to, a una de b
CR..(¡. - Una s de ellas. días nos proponemos llam a rl a «decir verdad .. y a la otra
Soc. - Supongo que la que a tribuye a cada uno la que «decir fal se dad ... Ma s s i ell o es a sí. si es posible a tribui r
le es pro pia y semej a n te. in correctamente los nomb res y no a sign a r a cada cosa lo
eR AT. - También yo lo supo ngo. que le co r responde, s ino a veces lo que no le corrcspon-
-
446 DI ÁLOGOS CRÁT ILO 44 7

de , se ría pos ible lo m ismo con los ve r bo s ,... y si es po- SOco- Lu ego. quizás, ¡por Zeu s !, lo m ismo que en las
sible disponer ast nomb re s y verbos. a la fu erza tambi én otras a r tes, un legis lador se rá bueno y ot ro malo si es que
e las o racio nes - pues las o raci ones so n, se gún p ien so, la e n lo a nte r ior hem os llegad o a un acue rdo.
co m bi nación de és tos- o ¿Cómo lo explicas tú. Cr á tilo ? CRÁT. - Es o es. Pe ro observa rás. Sócra tes, que c uan-
CRÁT. - Así. Creo qu e d ices bi e n. do asigna mos a los nom bres est as letras (la a, la b y cada
Soc. - Lu ego s i, a s u vez, co m pa ra mo s los nom b res uno de los eleme ntos) media nte el a r t e gr amatical, s i omí- 432a
p ri mari os con un gra bado, se rá posi ble l.'
- lo mi sm o ti mos, a ña dim os o a lte ramos a lguno, ya no te nd re mos es -
qu e en la s p int ura s- re produci r todos los colores y foro cr it o el nombre - no di go que no sea cor rec to-c. sino qu e
mas cor respon dien tes; o bie n no re pro du cirl os tod os. s i. ni siqu ie ra está escri to en a bso lu to, antes bie n, se con vicr-
no om iti r algunos y añadir otros ta nto e n mayor número te, a l punto, en ot r o nombre s i le ac on tece a lgo de est o.
como ma gnitud. ¿ No es ello pos ible ? Soc. - [Cuidado, Crát ilo, no va yamos a an aliza rlo mal,
CRÁ T. - Lo es. s i lo hacemos de es ta fo r ma!
Soc. - ¿ Por en de. el que reproduzca lo d os producirá CRÁT. -¿ Cómo. e n to nces ?
he rmosos gra bados y re t ra tos y. en cam bio, el qu e a ñada Soc. - Pu ede qu e esto qu e t u dices s uceda con aque-
o suprima. producirá también gra bad os y re tratos, pero llos no m bres cu ya e xist encia depend e for zosamente de u n
malos ? nú mero . Por ejemplo, el mismo d iez -o cualquier otro nú -
d CRÁT. - Si. mero q ue prefi era s- oSi le qu itas o a ñad es algo, a l pu nto
Soc. - ¿ y el que imita la esencia de las cosa s median - se convie r te e n ot ro . Pe ro pue de que no sea ésta la e xacti- b
te si la bas y letras ? ¿ Es que por la mi sm a razón no o bt en. t ud e n lo que toc a a la c ua lidad o. en gene ra l, a la imagen .
d r á un bello re trato, est o es, un nombre, s i re p roduce'rc- An tes a l cont ra ri o, puede qu e no ha ya q ue reproducir a b-
do lo qu e co rresponde, y, en cambio, ob te ndrá un re tra- so lu tamente todo lo im itado, tal c ual es, s i queremos que
to, pero no bello, s i omite pequeños det alles o añade otros se a u na im agen. Mira si tiene algún se nt ido lo que digo:
ocasionalmente ? ¿ De tal forma que unos nom bres est a. ¿es que habría do s ob jet os ta les como Crát ilo y la image n
rán bien elaborados y ot ros mal ? de Crá tilo, si un di os re produjera como un p intor no sólo
CRÁT. - Qu izás. tu co lo r y forma. s ino que form ara tod as las e ntra ñ as tal
t Soc . - ¿Quizás , e nto nce s, uno se rá u n bue n a rtesano como so n las tuya s, y re p rod uje ra tu b landu ra y co lor y e
de nom bres y ot ro ma lo? les inf undiera movim iento. alma y pe nsa mie nto como los
CRÁT. - Sí. que tú ti enes ? En u na pa la bra, si pus ie ra a tu lad o un d u-
Soc. - y és te t ie ne el nombre de .. legis lador ». pli cado exac to de todo lo que tú tienes, ¿h a br la entonces
CRÁT. - Sí. un Crá tilo y una imagen d e Crátilo o do s Crátilos?
CRÁT. - Paréce me, Sóc rates, q ue se r ia n dos Cr át ilo s.
Soc o- ¿ No ves, e ntonces, a migo mí o. que ha y q ue bus-
1.. er. n. SS. Aqu i rhl m ll l i~n ~ ~I se n tido mas re s lring id o y e xecro car e n la imagen una e xac ti tud di stinta de las que señalá-
de _ve rbo ». bamos a hora mi s mo ?, ¿que no ha y qu e ad m itir a la fu er-
1M La com pa ración de los numb re s con Jos gr a bad os se a la rga en ex-
za qu e si le falta o le so bra algo ya no es un a imagen ? ¿N o d
ceso {ocu pa to da la letra el, por lo q ue est a p r ime ra frase res u lta
a naco lúñca.
448 DIÁLO GOS CR ÁTILO 449
te pe rcata s de lo m uc ho q ue les falta a las im á gen es para no parezca que también nos ot ros llegamos, en rea lidad, b
te ner lo mismo qu e aquello de lo q ue s on imágenes? a la s cosas más t arde de lo convenie nte. O si no, b úscal e
CRÁT. - Si, sí. al no mb re otr a cl ase de exactitu d y no co nve ng as en que
Soc. - Sería r idíc ulo, Crátilo, lo qu e experimentarían e l no mbre es una manifest aci ó n de la cosa m ediant e síla-
po r cu lpa de Jos nom bres a q ue llas cos as de las que los bas y le tr a s. Pu es si manti enes es t as dos afi rmaciones , no
no m b r es son nombres, s i todo fu era igu a l a e llos en to- serás capaz de ponerte de ac ue rdo con tigo mi sm o log.
do s los casos . Pu es todo sería doble y nadie se ría capaz CR ÁT. - Bueno, Sócrates, me parece qu e hablas co n
de d is t in guir cuál es la cosa y cuál el no m b re. m esura. Tal es mi dis posición .
CRÁT. - Dice s verdad. S6c. - Bien, pu esto q ue en est o som os de la misma opio
SÓc. - Pues bien , no ble a m igo, te n valo r y concede que ni ón a na licem os a continua ción es t o otro: ¿sos te ne m os
e un no mbre es tá bien puesto y ot ro no . No le oblig ues a que.'si e l nombre va a es t ar bien puesto , h a de te ne r las
q ue te nga todas las le t ras par a q ue se co nvierta , sin m ás , le t r as co rrespond iente s ?
en aquello de lo q ue es nombre. Permite que se. añada un a CRÁT . - Si.
le tra q ue no le corresponde; y si una let r a, ta m b ién un S6c. - ¿ y le co rrespon de n la s que so n se meja ntes a e
no mb re den tro de la fras e; y s i un nombr e, a dmite tam- la s cosas?
bién q ue se a pliqu e de ntro del di scurso una fras e q ue no CRÁT. - Desd e luego.
corresponda a la r ea lidad. Admit e q ue, no po r e llo, deja S óc. - Po r consiguien te , los qu e es tán bi e n puestos lo
de nom bra rse o de cirse la cosa, con tal que s ubsista el bos- est án así. Mas si alguno no está bien puesto, su m ayor par-
quejo de la cosa so bre la q ue versa la fras e, lo m ism o que te co ns t a rí a , q uizás, de let ras correspo ndientes y se me -
433a lo había en lo s no mb re s de lo s e lemen tos, si recuerdas lo jantes - dado que va a se r u na imagen-, pero te n dría una
que decíam os, ha ce poco, He r m óge ne s y yo H,". parte no corr espo nd iente po r la c ua l el nom bre no se rí a
C RÁL - Lo r ecuerdo. correc to ni es taría bi en a cabado. ¿Es así como lo formu-
Soc . - E xcel ente, en ve rdad. y es que, m ientras sub- lamos, o de o tra forma?
sis ta es te bo squej o, aunq ue no posca todo s los rasgos per- CR ÁT. - Pienso q ue no debemos segu ir pel eando ha s-
ti nente s, q ue dará en unciada la cosa; b ie n, cuand o tenga ta e l fina l, Só cr a tes, por m ás qu e no m e compla zca soste-
todos, y ma l, c uando pocos. ne r que un nombr e ex is te y, sin embargo, no es tá bi en
Ad m itamos, pues, fe liz amigo, que se e nunc ia , a fin de puesto.
q ue no inc ur r am os en falt a como lo s de Egina cu a nd o cir- Soc. - ¿ Te com p lace, ac aso, esto otro: q ue el no mbr e d
c ulan de noche y so n multados por vi ajar ta r de 167 . Que es u na manifestación de la co sa?
C RÁT. - Sí.
1M el'. 426c.
'''1 Pr o bablemente , el tex to esta corrupto, lo cual os curec e más aún
la alusión a es ta co st um br e de los eginetas . Son a tractivas la s conjetu-
ras de Bu r net , pero opsiodiofA es pala bra no a tes tiguada, y opsismoü só- 16" la frase . así formulada. q ueda un ta nt o oscura. las dos afi r ma-
lo en DION ISIO ns H ~ lI C~R N ~ SO (IV 46), con el inconven ien te de elimina r cio nes con tra d ictorias so n: a}el no mb re es un a manifes ta ción de la cos a
hodou qu e pa rece palab ra sana. S ug iero e l cambio d e opsé por opstou mediante sílabas y let ra s; b} el nomb re no es ta l, si n o pose e todos los
(cf. prN(lARO, Ístmicas IV 38). rasgo s pe r tine nt es de la cosa.
61. - 29
450 DI ÁLOG OS CRATl LO 451l
Soc. - ¿ En camb io. no te pa rece bien afirma r que u nos lo que los nomb re s so n im it ac ión ? ¿ Y no son los elemen-
nom bres son compue s tos a pa r tir de los p r ima ri os y qu e t os aq ue llo con lo que ha y qu e com poner los ?
o tros son prim a r ios ? C RÁT. - Sí.
CRÁT. - Claro que sí. SÓe. _ Entonces, tu com pa r tes e n este mo men to lo
SOC. - Pues s i lo s p r ima r ios han de se r ma nifes tacio- qu e dec ía He r mógen es a ntes. Vea mo s, ¿ te pa rece bien que e
nes de a lgo. ¿e nc uent ras tú u na fo rma mejor de que sean digamos que la r se a se meja a la ma rch a , al mo vi mi e nto
e man ifestaciones qu e e l hacerl os lo más parecidos po s ible y a la rigidez 1.... , o no ?
a aquello que tien en que manife st a r ? ¿ O te satisfa ce más C a ÁT. - Me parece bie n.
est a ot r a f órmu la q u e sost ienen He r mógenes y m u ch o s Soc. _ ¿ y la 1 a lo liso , bl ando y a lo qu e a ntes
ot ros: que los nombres son obje to de conve nción y que rna- declamas?
n ifie stan las cos as a qu ienes los ha n pactado y los cono- C RÁT . -Sí.
ce n; qu e es to es la e xac t itud del nom bre. conve nci ón , y Soc . _ ¿ y s ab es que para la mi sma noci ón nosotr os
q ue nad a im po r ta s i se acue rda est a b lece rlos como a ho- dec tmos sk li rot és (r ig ide z) y los de Ere t ria sk li rotl r? 111.
ra está n o. po r e! co ntra rio. lla mar «gra nde s a lo que a ho- CkÁT. - Desde luego .
ra se llama «peque ño » ,...? ¿Cu ál de (as dos fó r mulas te Soc. - ¿Se rá enton ces que la r y la s se ase mejan a lo
sa tis face? mismo y la pa labra s ignific a para aqu éllos . termin ando
4 34a CIl ÁT . - Es tota l y absoluta ment e mejo r, Sócr a tes. re- e n r, lo mismo qu e p a ra noso tros te rmina ndo e n s ? ¿O no
p resentar medi an te se meja nza y no a l aza r aq uello que se s ignific a nada para algunos de no sotr os ?
re prese nta . C RÁT . - iCla ro qu e lo s ignifica. pa ra unos y para otros! d
S éc. - Dices b ien. ¿ No se rá e ntonces inevi table - s i SOCo_ ¿ En ta nto q ue r y s son se me jan tes , o e n tan to
es que el nom bre va a se r semej ant e a la cosa- que sea n que no lo son ?
se meja nt es a la s cos as los ele mentos de los qu e se como CRÁT. - En ta n to que se mejante s.
ponen los nomb res primar ios? Me refiero a lo s igu iente: Soc. _ ¿Y acaso so n se meja ntes e n todos los casos ?
¿ac aso la pin tura, a la que a lu día mos ha ce un inst a n te, CRÁT. _ Qu izá s í, a l m e no s pa r a s ign ific a r el
b se ha b rí a com pu es to se meja n te a la rea lida d, s i los pig- movimien to .
mentos con los que se com pone n las pinturas no fue ra n Soc. - ¿ y también la 1que ha y e n medio ? ¿N o s ignifi-
se meja nt es po r na t ural eza a aquell o qu e imita el gra ba - ca lo con tra r io de la ri gide z?
do ? ¿N o es im po sib le ? C RÁT . - Quizá no es tá bien a hí, Sócrates. Com o lo qu e
C RÁT . - Im pos ible. explicabas a Hermógen es ha ce un ins ta nte supr imie ndo
Soc . - ¿Po r consig uient e tampoc o los no m bres se rian
.,. ef. 4 2(>(:, pero a lll. en realid ad , no se h ilbla pilril na da de uigi·
se mejan tes a nada, s i aque llo de lo que se com po nen no
d eh . . Lo aflade aq ul p !J,tón pa ra ju st i!ica r la prese ncia de r en la pa la·
t uv ie ra. en pri ncipio, un a cier ta se mejanza con aquello de b ra sIt.~/¡ru'lr q ue vie ne a co n un ua c jón ? ¿ O k /ll sk /iró/i ,i es u na a d ició n
~sle rio r in tro d ucid a eo n el mis mo o bjrlo? . ,
. 111 El ro taci s mo (cambio de s e n r) es u na Cilractens llca del .lDn io de
,... T¡II 11b i':'n ~'n 1.. ('<l ft<l l/JI (J 43c¡ ado"t.. PI" lOn u n " plJsid " " co n- Eret ri a y Oro po , pero, co ntra lo q ue afirma aq u í Pla tón, ningu na in scrip-
~ enc ionaJis taco n respe cte a l leng uaje: . ¿q uii'n nos im pide llamar ' re~" c ión ha doc u me n ta do hast a ahora e l rotac ismo e n pos ició n fina l (si e n
to' a lo que lla ma mos 'circular' o 'ci rc ula r' a lo q ue lla mamo s 'rec to ' ?_. d e o y laconio), d. Bucx , l 'he Creek ..., págs. 56·57 .
452 DlÁ I.OCOS CRÁT ILO 453

e int roduciendo las le tra s que e ra menester. ¡Y bie n que que podrtas ap licar a cada numero nombres semejantes,
me par ec ía ! Con q ue a hora es pos ibl e q ue h aya q ue pro- si no pe rmit es que tu cons en so y convención t engan so- e
nunci ar r en vez de 1 m. bera nía sobre la exact it ud de los nombres ? ¡Cla r o que yo ,
e 56c_- Dices bien. ¿Mas qué ? Ta l como ha bla mos a ho- pe rso nalmente, prefiero que los nombres tenga n la ma-
ra no nos en tende mos m ut ua men te , s i uno dice sk ler ón, yor se meja nza po sible con la s cosas ! Pe ro te mo que, en
y no sabes lo q ue yo q uiero deci r ah ora? reali dad, como decía Hermó gen es In , resulte «fo r zado-
CRÁT. - Sí, queridl simo amigo, pero por la costumbre. arras trar la semejanza y sea inevitable se r vir se de la con-
56c. - ¿ Y cu a ndo dic es «costumbre », c rees qu e dices vención , por grosera que és ta sea, pa ra la e xac t itud de los
algo dis tint o de «convención »? ¿O ent ien des por cost um - no mbres. Y es que, quizá, se habl a r ía lo má s bellamente
b re a lgo di s tin to qu e el qu e c ua ndo yo digo esto p ien so posib le c ua ndo se hab la ra co n nombres s emeja ntes e n su
en aquello III y tú com prendes que yo lo pie nso? ¿No en- to talidad o en su mayoría - est o es, con n ombres d
t iendes est o ? apropiados- , y lo má s feamente e n caso contra r io. Pero
43Sa CRÁT. - S i. dime a cont inuación todavia una cosa : ¿cuál es, para no s-
Soc. - ¿ Lue go s i me com prendes c ua ndo ha blo , te rna. ot ros, la fu nció n q ue tienen lo s nom b res y c uál decimos
nifiesto algo? que es su hermoso resu ltado?
CRAT. - Sí. CRAT. - Creo que enseñar, Sócrat es. Y es to es muy slm-
Soc. - Y, sin e mba rgo. hablo con ele men tos di stintos pie: el que conoce los nom bres, conoce también las cosas.
de aquello que pienso. s i es que la 1no es, segú n tú mi smo SOC. -Qu izá, Crát ilo, sea es to lo que quieres deci r:
a fir mas, semeja nte a la r igid ez. Y s i esto es así , ¿ no se rá que, c ua ndo alg uien conoce qué es el nom bre (y és te es
q ue lo ha s pactado cont igo mi smo, y para ti la exactit ud e xac ta me nte como la cosa): conoce rá t a mbién la cosa, e
d el nombre es conven ción, dado que ta nto las letra s se- puesto qu e es semejante al nomb re. y que, por ende, el
me jantes com o las desemeja n tes t ie nen s ignific ado, con a rte d e las cosas se mejantes ent re sí es una y la mi sm a .
ta l que la s sa ncionen cos tum bre y conve nc ió n ? Pe ro , a un Conforme a esto, quie res deci r, segú n im agino, qu e el qu e
e n el caso de que la co stum b re no fue ra exac ta mente co n- conoce los nombres conocerá ta mbién la s cos as.
b vencíón . ya no seria co rrecto deci r que el medio de mani- C RÁT, - Mu y cierto es lo que dices.
fes ta r es la se meja nza , s ino más bien la cost u mbre. Pu es SOC. - ¡Un momen to ! Vea mos cuá l se rfa esta fo rma de
és ta, se gún parece, manifiesta tanto por med io de lo se- e nseñanza, a la que a hora te refie res, y s i - po r más que
me jante como de lo dese meja nte . y co mo quiera q ue cc ín- ésta se a mej or- e xiste otra, o no h a y otra q ue ésta. ¿Qu é
ci d im os en esto, Crát ilo (p ues in te rpre to tu s ilenc io como op inas de las do s alternativas ?
co nc esión), result a, sin duda, inev itab le qu e tanto co n- CRÁT . - E st o es lo que yo supongo; que no existe otra 4366
venci ón como costumbre cola bo re n a manifestar lo que en a bsolu to y qu e ésta es única y la mejor.
pe ns a mos c u a ndo habla mo s. Porque. mi nobilísimo a mi-
go, refirámo no s a l n úme ro 170 s i qu ieres: ¿cómo p ie nsa s
d a d e q u e c a mb ian do un s6 10elemen to «u n no mb re se conv ie rtc a l p un o
u a E.~ dec ir. 51crFro5. to en ot ro nom b rc _, aqu l se re vela com o a rgumento a fa vor del
ITJ El nomb re es <c 510.; <aqu cllo ., la noción. c o nven ciona li ~mo .
lH El n úme ro. qu e en 432a le se r vía a Crá tilo co mo a poyo a su tec - 111 c t. 414c.
454 DI ÁLOGOS
r CR ÁTIL O 455

Soc . - ¿Acaso sucede lo m ismo co n el de scubrimien- hombre de be tener mucha reflexió n y a nálisi s sobre s i el
to de los se re s: que el qu e desc ubre los nombres descu- in icio de todo as unto está correctamen te establecido o no.
bre ta m b ién aq uello de lo q ue son nombres ? ,O ha y que Pu es, un a ve z re visado éste, el rest o debe pa recer cons e-
bu scar y des cu b r ir por ot ro p roc edimiento, y en cambio, c ue nte con él. Y, de sde luego, na da me ex traña ría que tam- e
conocer po r éste ? bié n los nom bres conc ue r de n ent re s í. Revisem os. pues ,
CII.ÁT. - Ha y q ue bu scar y descubrir a bsolu ta mente lo Que hemo s e xp licado a l principio . Afirmamos q ue los
po r este m is mo proce dimi e nto y e n la s mis ma s nom bres nos ma nifiest a n la esencia del uni ve rso en e l se n-
condiciones. t id o de Que éste se m ueve. ci rc u la y flu ye 11• • ¿Te parece
b soc. - Veamo s. pu es , Crát ilo . Reflexionemos: s i un o Que lo ma nifi es ta de o t ra forma ?
busca las cosas dej ándose guiar por los no m bre s -exa- CRÁTo - Preci same nte a sí. Y lo manifiesta co n e xac- 437a
minando qué es lo q ue s ign ific a cada uno- , ¿ no como rlt ud.
prendes q ue no es pequeño el ri esgo de dejarse engañar? S6c. - Pues bien. tomemo s e ntre ellos, e n prime r lu-
Cexr . -¿ Cómo? ga r, el de epistlmé y exam inemos cuán equ ivoco e s: más
SOCo- Es obv io que ta l como j uzgaba que eran las ca. parece sig nificar qu e detiene nuestra alm a sob re las co-
sas e l primero que im p uso los nombres, así im puso éstos, sas que el que se mueva con ellas. y es más exac to pro-
según afirmamos . ¿ O no ? nunciar s u ini cio como ahora que no epeis ttme. insertan -
CRÁT.-SL do una e 111.
Soc . - Por ende. s i aquél no juzgaba correctamente y Después bebaion (cons is te nte) es imitación de • ba se . b
los impuso tal como los juzga ba, ¿qué otra cosa piensas (básis) y e repesos (s tásis). qu e no de movimiento. Después
que nos pa sará a nosot ros, dejándonos gu ia r por él. s ino h istoria mi s mo sign ifica que e de tiene el Flujo - (h ísti si
engaña rnos ? rhoü n).
CRÁT. - Mas puede Que no sea así, Sóc rates, s ino Que Tamb ié n pist ón (fi rme) sign ific a, a todas luces, . 10 qu e
el qu e impone los nombres lo ha ga forzo sa me nte con co- de tie ne s (h istd n). A cont inuación, m nem s (r ec uerdo) s ig-
e nocimie nto. Y es Que, s i no, como te decía ha ce ra to, ni n ifica, pa ra c ua lquiera, que ha y e reposo en el alma s (m o-
siq uiera se ri a n nombres. Sea és ta la ma yor prueba de Que nt en tei psychii) y no movim iento. Y s i qu ie res, hamartia
el Que pone lo s nombres no erró la verdad: e n caso con- (ye rro) y sy m pho rá (ac ci den te) 17' - s iempre qu e u no se
tra ri o, no se r ia n tod os tan acordes con él. ¿O no te ha s
pe rcat ad o, a l ha b la r, Que tod os los nom bres se originaban 1.. En 41 le marnfestaba Sóc ra te s q ue to dos los nomb re s hablan s i·
según el mi sm o mod elo y con un m ismo fin ? do puest o s ¡;egún la idc a d e que to do se mue ve. Pero s i a lU ya ex p res a ba
iU esce pt ic ismo d icien do que, q uizá, son los q ue pu s iero n los no mbres
Soc . - ¡Pe ro m i bu en amigo Crátilo! Es to no es nin-
q uie nes d e tan to d ar vueltas se ma rean (cf., ta mb ién, 439c ), aq u t va a d e·
gún argu me nto, pues si, equ ivocado e n el inicio el que po - mo stra r qu e se pu ed en e xplic ar en sent tdc c on tra r io, co nforme a la ldea
d ne los nombres, ya iba fo rza ndo los d emás h aci a éste y de repo so.
los obligaba a co ncordar con él mi smo, nada t ie ne de e x- III n . n. lOS.
traño. Igu al sucede, a veces, co n la s figu ras geométricas: " ' Hanrania puede re lac iona rs e, o bien co n !loma r/f u «acompañar»,
o bien co n háma la (de "i mi); sym phorá . .. ccld em e con sympiJi res/ilai,
s i la primera es e r ró nea po r pequeña y borrosa, todas las
ve rbo con e l q ue e n 417 a ex p licaba sympñora - cc nver uente• . Dc es ta lor-
demás que le s igue n son acordes en tre s í. Así pues, todo rna, a mbos son s inón imos de synesis y epist ém e, ex plicados en 4 12a co-
r 457
456 DI ÁLOGO S CRÁTILO

de je guiar por el nom bre- parecen idé nticos a la ecom - Soc. _ ¿ Entonces también afi rmas q ue el que puso los
prens i ón - (synesi s) de antes, a la «c te n c ia , {epíst éme] y a pri ma ri os lo s pu so con conoc imiento?
todos lo s otros no mb res que hace n refe renci a a los va lo- CRÁT. - Con conoci miento.
res se r ios. Soc . - ¿ Entonces con qué nombres conoció o desc u-
Toda vía más: amathía (ignora nci a) y akolasía (in te m- brió las cosa s, s i lo s prima r ios aun no est aban puest os y, b
peran ci a) parecen cerca nos a és tos . En efecto, ama th ia se de ot ro la do, sos te ne mos que es im po sib le conocer o des-
e manifiest a como el ernovim ie ntc de lo qu e marcha en co mo c ub ri r las cosas s i no es con ocie ndo los nom bres o descu-
pe ñía de dies e tporeta loú háma the ói ió n/os) y. a su vez, briendo qu é cosa s ignifica n ?
akolasía exactamente como «segu imie nto de las cosas » CRÜ. _ _Creo , Sóc ra tes, que objetas a lgo gran ' .
{ak olou tlna Ibis prágmasi). De esta forma los no mbres q ue SOCo_ Por consig uiente. ¿e n qu é sentido d ir emos que
el u so impon e a las no cio nes peores se nos manifi est an im p usieron los nom b res con conocimie nto, o que son le-
exac tamente iguale s que los de la s mejores "". gisla dores, a ntes de que estuviera puest o nombre alguno
Cre o que s i uno s e molesta ra. descubrirí a m uchos y ello s lo conocie ran, dado que no ha y ot ra fo rma de co-
ot ros, a parti r de los cuales podría pe nsar qu e quien esta- nocer la s cosas que a pa r tir de los nom bres ?
blece los nombres quiere manifestar las cosas no en mo- CRÁT. - Pien so yo , Sóc rates, que la razón más verde- e
vimiento o circulación, s ino en reposo. dera sobre el tema es ésta: existe u na fuerza superior a
d CRÁT. - Si n embargo, Sócrates, ya ves que la mayor¡a la de l hombre lila que im puso a las cosas los nomb res pri-
los ha manifestado de la otra forma. marios , de fo rma que es inevitable que sean exactos.
SOC. - ¿Qué s ignifica e n to nc es esto, Crát ilo ? ¿Conta- soc. - ¿ y c rees tú que el que lo s puso, si era un di os
remos los nom bres como votos y en es to consist irá su exac- o un demon . los ha bria puesto en contradicción con sigo '
t it ud? ¿ Es que el mayor nu me ro de cosas que se vea q ue mis mo ¿ D pie nsas que no tie ne valo r lo q ue aca ba mo s de
sig n ifican los nombres va a se r el verdadero ? dec ir ?
CRÁT. - No es lógico, desd e luego. CRÁT. - ¡Pero pu ede que un a catego ría de es tos nomo
Soc. - ¡De ninguna mane ra, a migo ! Conque dej e mo s bres no ex is ta!
esto así y regresemos al punto desde el cual hemos lIega- SOco_ ¿Cuál de la s dos, e xcelen te a migo: la de los q ue
438a do aquí. Pues ya a nterior mente , s i recue rdas, afirma ba s cond ucen a l reposo. o al movimiento ? Porque, segun lo
que el que im pone los no mbres hab ía de pone rlos, forzo- a n tes d icho, no va a decidirse en razón del núme ro.
sa me nte, con cono ci mien to, a aq uello a lo que se los im- CItÁT. - No ser ia razonable en mo do algu no, Sóc rates. d
po n ía . ¿Acaso s igues opina ndo toda vía así, o no ? SOCo- Por ta nto, si los no mbres se encuent ra n enfr en-
CRÁT. - Tod a vía . lados y los u nos afi r ma n que son ell os los qu e se a serne-
jan a la ve r da d, y lo s otros que son ello s, ¿con q ué crtte-
mo p roced en tes d e sY'lili'llu' «a co mpa ña r » y de hli pQm« i [id.], respec-
ti v~ ment e .

11. En la ser¡e e timo lógica a n terio r (416b y 421b¡ se veía que los IOIJ Crátilo se rdugia, finalme nte . en la idea de un legis la do r ~ob re­
nom.bres de nocion es neg a tivas (lit. «cens ur able s», ps eklá) coincidian eu- hu ma no. Pero es to ya había sido rec hazado (cf. 425d) co mo una e~asiva
mu l~glcall1"nle con la idea de re puso; las pos itivas (li t. «eiogla bies », epaí - s imila r al d~u s u: machina de la t ragedi a. Ahora vem os más claramen te
'lela), e n ca mb IO , 0:.:0 0 la idea de mov im iento. por q ué el h ipo té tico legis la dor no p ued e ser sobrehumano.
r
458 DlAL OGOS CRÁTILO 459

rio lo va mos ya a discernir o a q ué recurr im os ? Desd e lue- hay qu e conocer y busca r los se res en sí mi smos m ás qu e
go no a otros distintos - pues n o los hay-, co nq ue ha brá a partir de los nom b r es.
que buscar, evidentemen te, algo aje no a los nombres que CRÁT. - Parece claro, Sócrate s.
nos aclare s in nec es idad de nom bres cuáles de ellos son SOCo _ Pues bi en, examinemos todavía - a fin de que
los verdaderos; que nos demuestre clar amen te la verdad eso s muchos nombr es que tienden a lo mismo no nos
de los s e res . engañen-e , si , en realidad, quienes lo s impusieron lo hí- e
e CRÁT. - Así pienso yo . cieron en la id ea de que todo se mueve y flu ye (así opino
Soc. - Por consiguien te, es posib le, según p arece, co- yo personalmente que pensaban); o bi en, si acaso esto no
nocer lo s seres sin necesidad de nombres - s iem pr e que es así, son ellos mismos los que se agitan co m o si se hu-
la s cosas se an as í. bieran precipitado en un remolino y tratan de arrastrar-
c;R ÁT. - Claro. no s en su c aída 111. Porque con s ide r a, admirable Crátilo ,
439a Soc. - ¿Entonces po r qué otro procedimi ento es pe r as lo que yo sueño a veces: ¿dir emos que hay algo bello y bue-
todavía poder conocerlos? ¿Acaso por otro d istinto del que no en s i, y loo m rniismo co n ca d a uno d
e osi o no?. 1" . d
seres,
es razonab le y justísimo, a sabe r, unos seres por medio CRÁL - Cr eo yo que si, Sócrate s.
de otros, s i es qu e tienen algún pa rent esco, o ellos por sí SOCo_ Consideremos, entonces, la cosa en sí. No si hay
mi smos? Pues , s in duda, un procedim iento ajeno y distinto un rost r o he r m oso o a lgo por el estilo - y parece que to-
de e llos pondría de manifiesto a lgo distinto y aje no pero do fluye- , sino si vamos a sostene r qu e lo bello en s í es
no a ellos. sie m pr e t a l cual es.
CRÁT. - Me parece que dices verdad. CRÁT . - Por fuerza.
SOc o- [U n momento, por Zeus! ¿Es que no hemos SOe. _ ¿ Acaso, pues, será posible calificarlo c on exac-
acordado muchas veces que lo s nombre s bi en puestos son titud afir m a ndo, primero, qu e ex is te y, de spués, que e s
parecidos a lo s seres de lo s que son nomb res y que son tal cosa, s i no dej a de evadirse? ¿O, a l tiempo qu e habla-
im a gen de la s c osas? mos, se convierte forzo samente en otra cosa, se evade y
CRÁT. - Si. ya no es así?
S Oco - Por cons ig uie nte, si es po sible c onocer las ca. CRÁT. - Por fuerza.
sa s principalmente a través de los nombres, p ero tam bién SóC. _ ¿ Cómo, e nto nce s, po d ría t ener a lguna exis t en- e
por sí m ismas, ¿cuál será e l más bello y claro co nocim ien- c ía aquello que nunca se mantiene igual? Pu es s i un mo-
to: conocer a partir de la im a gen si ella mi sma t iene un mento se mantiene igual, es evidente que, durante ese
cierto parecido con la realidad de la qu e sería imagen, o
b partiendo de la r ealidad, co noce r la r ealidad misma y si
101 el. 411c.
su imagen está convenientemente lograda? lO' El princi p io de q ue lo s seres son en sí ya hab ía quedado se n ta-
CRÁL - Me parece fo r zoso que a partir de la realidad. do en 486 d y ss.. como co nsecue nci a de la ref u taci ón de la teoría de Pro-
SOCo- En ve rdad, puede que sea s upe ri o r a m is fuer- tá go ras . Aqu[ se dice a lgo más (qu e lo en si es siempre idéntico y n unc a
zas y a la s tuyas dilucidar de qu é forma hay que conocer aba ndon a su fo rm a) y se d esarrolla n s u s imp lic aciones ep iste mo lóg icas
(só lo e l se r en si permite el con oc imie n to). S in em ba rgo . Sócrat es no He-
o descubrir los seres. y habr á que contentarse con llegar ga a ello po r u n proceso di aléc tico si no ac ud ie ndo a u n sueñ o qu e tk ne;
a este acuerdo: que no es a par tir de los nombres, s ino que co mo. e n oca s io nes. re c ur re a un m ito .
460 D IÁLOGOS

tiempo, no ca mbia e n absolu to. y s i sie m pre se m ant iene


r CRÁTI LO 46 1

jo y ca ta r ro . En de fin it iva, Crát ilo. q.uizá la s c~sa s sean


igual y es lo m is mo, ¿cómo pod ría d io camb ia r o move r- a sí, o q u izá no. As! pues, de bes consi dc r ar'lo bie n y co n
se , si no abandona s u pro pia fo rm a? va le ntía y no acep tarlo fá cilmente (pue s aún e re s jo ven
C RÁ T . - De n ingun a mane ra . y ti e ne s la eda d); y, una vez que lo ha ya s con side rado. c o-
Soc. - Pe ro es m á s . ta m poco podría se r conocido por m unícame lo tambié n a m í, s i e s q ue lo de scu bre s.
na di e. Pu es e n e l ins ta nt e m is mo e n q ue se acercara q ui e n CRÁT. _ l o ha ré. S in em ba rgo. Sócra te s, te n por segu-
440a va a conocerlo. se convertirla en ot ra cosa d is tinta, de fo r o ro q ue ta m poco ahora a ndo s in e xa mina rl o. Ante s bien ,
ma que no podría co nocerse q ué cosa es o có mo es . Ni n- per écemc . c ua ndo me oc u po de a naliza rlo, que e s, má s
gu na clase de c onocim iento, e n verda d. co noce c ua ndo s u bi en, de la fo rma en q ue lo di ce He r á cl ito. e
o bjeto no es de ningu na m a nera. SOC. _ [En to nces. ha sta luego ! Ya me inst rui rá s, como
CRA.T. - Es como tú dices. pañero, c ua ndo es tés aquí de vue lta. Ahora dirígete a l cam-
Soc . - Pero es razonable soste ner que ni siq uie r a ex¡s- po , tal como e stá s equipado, que aquí He nnó gene s te
te el co noci m ie nto, Crát ilo . s i todas la s cosas cambian y acom paña rá.
nada perman ece. Pu e s s i esto mi smo, el conocim ien to. no eRÁl . - Así se rá, Sócrate s. Intenta también tú se guir
dejara de ser conocim ien to. permanece ría s iem pr e y s e- r efle xiona ndo sobre ello.
ri a conocimi en to . PC I'"O s i, in cluso. la fo rma m isma de co-
nocimien to ca m bia. simu ltáneame nte ca m bia rí a a otra
fo rma de conocim iento y ya no se ría co noc im ien to.
S i siem pr e es t á c a mb ia ndo, no podría haber siem pr e
b conocimiento y, COnfo r me a e ste r a zo na m ie nto. no habría
ni sujeto ni o bje to de conocim iento. En c a m b io. si hay
sie m pr e s ujeto, s i ha y o bj et o de cono ci miento: s i exi s te
lo bello. lo bue no y c a da u no de los se r es , e s evidente , pa -
r a m í. que lo que ahora dec imos nasalr os no se pa re ce en
a bsoluto a l fl ujo ni a l m o vimi e nt o.
e Por con sigu ie nle, puede que no se a fác il d il uc idar s i
e llo e s as i, o es co mo a fi r ma n los pa r tida r ios de H erá cl i-
to y m uc hos otros. Pe ro puede que ta m poco sea propio
de un ho m bre se nsa lo e nco menda r se a los no m bre s en-
gatu sando a s u pro p ia a lm a y, con fe ciega e n ell os y e n
quienes los pu sie ron , soste ne r con firm eza -como q ui en
sa be a lgo- y juzgar co nt r a sí m is mo y con tra lo s se r es
que sano no hay nad a de na da, s ino que todo rezu ma ca.
mo las va sijas de barro. En una palabra , lo mi sm o que
d quiene s pa dec en de catarro, pensar que ta mbién la s co -
sa s tienen es ta con d ició n, q ue tod a s es tá n som e tida s a flu -
l NOICE GEN ERAL

Págs.

G ORGIAS ... . .. .. . ..• ... ... . .. .. . ... ... ... .•. ... .. . ... . .. 7
~l EN t X EN O ••. •.• .. • ••• ••. ••• .. • .. • ••• .. • •.• ••• .•• 147
E UHO EMO 191

M ENÓN 273
C RÁTII_O ..• .•. •.. 339

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