Está en la página 1de 2

DISCURSO DE GRADUACIÓN

LUIS DICURU

Muy buenos días tengan todos ustedes, queridos directivos, maestros,


compañeros, madres, padres y público en general.

Tengo el honor de hablarles en nombre de la promoción “nro. 16” de 6to grado


del colegio privado Henri Pittier, esto es algo que personalmente me llena de
mucha alegría, ya que he compartido todos estos seis años con la mayoría de
ustedes.

Algo se termina hoy. Una etapa concluye. Se terminan años de estudiar.


Seguramente, habrán pasado por otro u otros colegios, pero hoy, su primaria,
la terminan aquí, en el Henri Pittier. Un colegio en donde ustedes, sus familias,
maestros, directivos, lo hemos dado todo para alcanzar esta nueva etapa, y lo
logramos.

Si vemos hacia a atrás solo podremos comprobar algo indudable, alcanzar esta
meta no hubiese sido posible sin todas aquellas personas que nos ayudaron
durante este recorrido. Como sabemos, el agradecimiento es algo natural, algo
que demuestra que reconocemos la ayuda desinteresada de los demás, de
gente que nos quiere y nos motiva a seguir adelante.

Sin lugar a dudas, al primero que debemos de agradecer es a nuestro Dios, al


ser que nos llena de bendiciones a diario. Él es quien nos da la vida, nos da la
oportunidad de gozar de una familia que nos ama, nos brinda salud y sobre
todo nos dota de capacidades, sabiduría e inteligencia para lograr nuestras
metas.

En segundo lugar, debemos agradecer a nuestros padres y abuelos pues


gracias a ellos es que estamos aquí, en este colegio, está claro que ellos
hicieron miles de sacrificios por nosotros, para que así no tengamos ninguna
dificultad y tranquilamente gozar de una buena educación. Aunque muchas
veces nosotros no reconozcamos estos sacrificios, son ellos quienes siempre
estarán allí con nosotros. Quiero aprovechar la ocasión para agradecer a mi
abuela Nilda Brito, quien me acompaño hasta donde pudo y sé que desde el
cielo está muy orgullosa de mi. GRACIAS MAMI ESTE LOGRO VA
DEDICADO A TI.

Todos sabemos que enseñar no es tarea fácil, todos nosotros deberíamos


estar grandemente satisfechos por la inmensa labor que hacen los maestros,
nos brindan conocimientos, nos aconsejan, nos dan su mano cuando la
necesitamos y también nos soportaron cuando éramos inquietos. Por eso es
que en esta oportunidad lo menos que pudiéramos hacer es agradecer la
ayuda de cada uno de nuestros maestros de todas las áreas, sin excepción. En
especial a nuestro maestro de 6to grado Rafael Salazar, se notó que ama
enseñar porque aprendimos muy bien, gracias por su paciencia, gracias por
sus lecciones y gracias por todo su cariño.

Y por supuesto hay otras personas a las que debemos agradecimiento, unas
personitas que de alguna manera nos han dejado algo y con las que hemos
disfrutado todos estos años. Algunos de nosotros hemos estado juntos, dos
años, tres, cuatro y hasta seis años, estoy convencido de que por más que
pase el tiempo y aunque nos separemos en esta etapa, seremos muy grandes
amigos y nunca nos olvidaremos. Gracias Compañeros.

Agradezco grandemente a mi Institución y a todo el personal que labora en


él, por habernos acogido en sus aulas durante todos estos años, cada día en
este colegio nos ha dejado algo maravilloso, y estoy convencido de que cosas
mejores vendrán.

Dios mismo dio ésta recomendación: “esfuérzate y sé valiente”. Y ésta viene


acompañada con una invaluable promesa: “porque yo estaré
contigo dondequiera que vayas”. Permíteme asegurarte que con eso es
suficiente, si tú das todo de ti y pones en las manos de Dios todas tus
dificultades, estoy seguro de que serás una persona de bien, a la cual todos
admiraran.

Que DIOS nos bendiga compañeros, Continuemos Hacia delante sin mirar
atrás, pero sin olvidar todo lo aprendido hasta ahora, que hay muchas metas
por cumplir.

Muchas gracias.

También podría gustarte