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y relación de ayuda
en ciencias de la salud
3.a edición
ERRNVPHGLFRVRUJ
© 2014 Elsevier España, S.L.
Travessera de Gràcia, 17-21 - 08021 Barcelona, España
Advertencia
La medicina es un área en constante evolución. Aunque deben seguirse unas precauciones
de seguridad estándar, a medida que aumenten nuestros conocimientos gracias a la inves-
tigación básica y clínica habrá que introducir cambios en los tratamientos y en los fármacos.
En consecuencia, se recomienda a los lectores que analicen los últimos datos aportados por los
fabricantes sobre cada fármaco para comprobar la dosis recomendada, la vía y duración de la
administración y las contraindicaciones. Es responsabilidad ineludible del médico determinar
las dosis y el tratamiento más indicado para cada paciente, en función de su experiencia y del
conocimiento de cada caso concreto. Ni los editores ni los directores asumen responsabilidad
alguna por los daños que pudieran generarse a personas o propiedades como consecuencia
del contenido de esta obra.
El editor
Técnicas de comunicación
y relación de ayuda
en ciencias de la salud
Técnicas de comunicación
y relación de ayuda
en ciencias de la salud
3.a edición
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A nuestra hija Sara
por su colaboración
Índice de capítulos
Autoevaluación..................................................................................................... 285
Conclusiones........................................................................................................ 297
Los vídeos que acompañan esta edición de la obra se dividen en dos partes. Una primera
en que se presentan actitudes puntuales sobre cómo el profesional de la salud debe actuar en
situaciones que nos resultan difíciles o complicadas, y una segunda parte en la que se mues-
tran entrevistas de pacientes que están viviendo lo que podíamos llamar situaciones límite.
Parte I
Paciente ansioso
Paciente indiferente
Paciente agresivo
Profesional cansado no explica cansancio
Profesional cansado explica cansancio
Profesional no explica el tiempo
Profesional explica el tiempo
Feedback
Profesional empático
Feedback-resumen
Empatía y confidencialidad
Método de resolución de problemas
Presentación de objetivos
Cómo comunicarse
Silencios
Preguntas
Recalcar lo positivo del paciente
Clarificar
Concretando actividades
Parte II
Bernabé se siente abandonado (anciano al que le han amputado las dos piernas)
Laura no quiere vivir (intento de suicidio de una madre que ha perdido a su único hijo)
Juan necesita saber (paciente ingresado por neoplasia de colon y nadie le informa de lo que
le pasa)
Matilde tiene miedo (paciente que la van a operar de bocio y tiene miedo a morir en la
operación)
Federico exige una segunda opinión (paciente al que le comunican que le van a amputar una
pierna y exige opiniones de otros médicos)
Laura no cumple la dieta (paciente que sufre de diabetes y no sigue la dieta)
José Luis quiere la verdad (paciente que pregunta si se va a morir)
Luis se niega a cuidar su ostomía (paciente al que se le ha practicado una colostomía)
xvii
Capítulo 1
Generalidades
sobre la comunicación
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
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4 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 5
Finalmente, el supuesto más preciado razón de ser, desaparezca como tal (ya sea
del sentido común queda reducido a una porque cambió la conducta del consultante
sencilla tautología: si se reflexiona sobre el o porque se modificó su interpretación de los
tema, está claro que algo es real tan solo en hechos) su mapa erróneo de guiar su realidad.
la medida en que se ajusta a una definición de Desde la perspectiva constructivista, habi-
la realidad. Si utilizamos una definición ex- tualmente utilizada en la terapia sistémica
tremadamente simplificada, pero útil, lo real y cognitiva, estos cambios de los mapas del
es aquello que un número suficientemente mundo se realizan a través de reencuadres,
amplio de personas ha acordado definir como redefiniciones o reestructuraciones.
real (Watzlawick et al, 1986). O, como ex- El reencuadre, según la definición del
presa en otro lugar: real es, al fin y al cabo, Vocabulario de Terapia Familiar, de Simon,
lo que es denominado real por un número Stierlin y Wynne (1988), «consiste en una
suficientemente grande de hombres. En este estrategia terapéutica que produce una altera-
sentido extremo, la realidad es una conven- ción en el modelo interno del mundo que tiene
ción interpersonal (Watzlawick, 2001). el paciente o la familia. Este modelo o “en-
Cada ser humano, entonces, se caracte- cuadre” dirige la conducta, los sentimientos
riza por la forma en que construye y orga- y el pensamiento». «Mediante esta interven-
niza en particular los acontecimientos. Esa ción, el terapeuta, el profesional de la salud,
construcción, constituida por componentes ofrece al consultante un sentido diferente a
cognitivos afectivos y conductuales, es su una situación o conducta problemática. Es
representación del mundo, su marco de re- decir, un mapa distinto para ver la realidad.»
ferencia, que determina a su vez un abanico Watzlawick (1976) señala: «Una rees-
de conductas o cauces de acción posibles del tructuración llevada a cabo con éxito deberá
sujeto. Por ejemplo, si alguien interpreta que extraer el problema de su definición de sínto-
la actitud rebelde de su hijo es consecuencia ma, transformándolo en otro». Desde luego,
de su propia incapacidad de ejercer la autori- no ha de tratarse de otra definición cualquie-
dad paterna, su modo de actuar será diferente ra, sino de una que vaya de acuerdo con el
que si interpreta que la rebeldía es en sí mis- modo de pensar y de considerar la realidad
ma un reconocimiento de su autoridad (se por parte del sujeto: una acertada redefinición
desafía a quien se reconoce autoridad). En situacional precisa tener en cuenta los puntos
el primer caso, la autoestima del padre se de vista, las expectativas, los motivos y las
verá deteriorada y, por tanto, su capacidad de premisas, es decir, toda la trama conceptual
ejercer la autoridad disminuirá notablemente. de aquellos cuyos problemas han de ser mo-
En el segundo, su interpretación lo fortalece dificados. «La reformulación debe sintonizar
en su posición y, por tanto, será más capaz de con el modo en que el sujeto tiende a definir
manejar la situación correctamente. su problema, ya sea en términos intelectuales,
de salud, emocionales, etc.».
Los mapas con los que nos guiamos
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6 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
ilusión». Esta ilusión nos lleva a debatir con peculiar y a veces distinta. De aquí que: «Lo
otros expertos y quedamos ciegos a otras co- que está claro para mí solo lo está para mí
sas que pasan por delante de nosotros y que y lo que está claro para ti solo lo está para
son parte de esa realidad. Por ello, la cons- ti». Pensamos que únicamente a través de un
trucción social-cultural y familiar sale al cru- buen feedback al contenido, al sentimiento
ce para señalar que lo que nosotros pensamos y la demanda de nuestro interlocutor (como
que es la realidad, es una construcción, fijada veremos al hablar del receptor) podremos
a través de una convención social para ser saber si hablando de lo mismo decimos lo
tomada como realidad. Los profesionales y mismo.
las personas en general convienen qué toman Esto nos lleva a intentar dar una defi-
como realidad y qué no. nición de comunicación; así, la podríamos
Esta idea está apoyada también por lo definir como un proceso continuo y dinámico
que Kuhn y Hanson (1980) han propuesto en entre dos personas, formado por una serie de
sus teorizaciones sobre las ciencias: «(…) el acontecimientos variados y continuamente en
científico ve el mundo a través de las lentes interacción. O, dicho de manera más clara:
de la teoría (…) Los cambios de paradigma por una parte, como una manifestación de
son análogos a los cambios de Gestalt de cómo yo, emisor, te manifiesto a ti, receptor,
la percepción» (Gergen, 1996). Y sabemos mi forma de captar, sentir y vivir en estos
lo que pasa con las figuras gestálticas, pues momentos mi realidad y lo que espero de
cuando algo es fondo no puede ser a la vez ti al comunicarte esta. Y por otra parte, tú,
foco. El hecho de focalizar la atención en como receptor, me reflejas (feedback) lo
algo nos imposibilita para discriminar en el que has captado de lo que yo, como emisor,
mismo grado otras cosas que quedan como acabo de decirte, tanto respecto al contenido,
fondo. al sentimiento y la demanda, como a lo que
Esto, llevado a la situación terapéutica has captado con el lenguaje no verbal.
o relacional, da más protagonismo al pro- La esencia de una comunicación eficaz
fesional y a los pacientes y abre una creati- es la respuesta comprensiva a toda una serie
vidad mayor con respecto a la participación de variables, las cuales iremos abordando
de ambos, donde el primero pasa a ser un a través de este libro. La comunicación no
coconstructor de cambios, los cuales no son es una transferencia de informaciones de un
generalizables y estandarizados, sino «loca- individuo a otro. A través de lo que vamos
les» y personalizados (Gergen, 1996), que a abordar en la presente obra mostraremos
respetan su idiosincrasia. El profesional en que los diferentes significados de los mensa-
esta corriente se ve motivado a tomar muy jes humanos no pueden ser transmitidos tal
en cuenta el contexto donde se da esa realidad. cual de un individuo a otro, sino que estos
Esta idea también ha sido desarrollada por el mensajes deben ser clarificados y negociados
interaccionismo simbólico (Blumer, 1969). por ambos, dado que pueden estar influi-
dos por numerosas variables; entre ellas, la
interpretación.
DEFINICIÓN DE COMUNICACIÓN
A menudo, la comunicación se da como un
hecho, como un intercambio material, como ALGUNOS FACTORES QUE
algo que tengo en mi cabeza e intento trans- INFLUYEN EN LA COMUNICACIÓN
portarlo a mi interlocutor, como si fuera una La percepción
máquina transportadora. Sin embargo, sabe-
mos que la comunicación no funciona así, La imagen que uno se hace del mundo y
sino que el significado de las palabras está del otro es un elemento esencial en la co-
en las personas, no en las palabras, y como municación. Para percibir es preciso sentir,
las personas adquieren experiencias distintas, interpretar y comprender el mundo en el cual
su forma de captar, interpretar y proyectar lo uno vive. La percepción es, pues, un gesto
que han captado del otro es muy particular, personal e interno.
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 7
Todos los datos que un individuo posee Bateson et al (1956) afirmaban que,
sobre el mundo deben pasar por sus senti- como en el caso de la visión binocular, era
dos. Sin embargo, ver no es siempre creer. importante que hubiese dos observadores que
Sabemos, y esto nos lo han descubierto los miraran a la misma familia, porque el mapa
especialistas de la comunicación, que los lí- que hacen dos es mucho más complejo que
mites fisiológicos del ser humano, como el que hace uno solo.
su ojo y su cerebro, pueden con frecuencia Esto, si es válido ante cualquier objeto, lo
ocasionar errores. es más cuando se trata de los seres humanos.
Sabemos también que los sentidos son Así, si se le pide a alguien una descripción de
impactados por un estímulo del exterior; se un objeto, quizá habrá pocas discrepancias
ve algo, se escucha algo, hay un estímulo que con lo descrito por el otro; pero si se solicita
impacta, y se elabora y transforma ese es- la descripción de una persona, las diver-
tímulo para confeccionar una representación: gencias aumentan porque hay factores que
pero la representación elaborada no coin- producen una distorsión como, por ejemplo,
cide con el estímulo, de lo cual la persona los intereses o las emotividades (como la sim-
no siempre se percata. Lo interesante es que patía o la antipatía) puestas en juego, pues sin
la persona ve algo, por ejemplo una silla. querer nuestra percepción está condicionada
Si pudiera presentar este estímulo a otras no solo por nuestra subjetividad, sino también
personas —de otro lugar, de otra época—, por nuestra emotividad e interpretación.
probablemente no dirían que es una silla. Es Siempre que se ve un objeto, se observa
decir, para esa persona, y de acuerdo con su con los ojos de la propia historia, de la ideo-
historia, ese objeto está construido como una logía aceptada, de la cultura en que se vive,
silla y puede, además, construirlo como si- de la experiencia; solo así puede mostrarse el
lla bonita, silla resistente, silla endeble, silla objeto (esto nos lleva a tener en cuenta que lo
incómoda, etc. El constructivismo (Glasers- que hacemos es una interpretación de este ob-
feld, 1989) establece que las personas trans- jeto). No hay observación pura, pues toda ella
forman y no se dan cuenta de ello, elaboran está contaminada por el pasado, el cual nos
y no se percatan de que lo hacen. En conse- condena a no ver las cosas como son y del que
cuencia, el territorio y el mapa nunca coinci- no hay forma de escapar (cfr. Osgood, 1976).
den plenamente; siempre el territorio es más A Alfred Korzybski, un científico y fi-
complejo que el mapa. lósofo polaco fallecido en 1950 en Estados
Esto, dicho con otras palabras, significa Unidos, se debe el concepto «el mapa no es
que la realidad siempre es más compleja que el territorio».
lo que se diga de ella. Por otro lado, es im- De acuerdo con Korzybski, todos los
portante señalar que la percepción en todo intentos humanos de explicar la realidad son
momento es selectiva. Siempre se verá una y han sido construcciones, representaciones,
parte de un todo; dentro de este, a unos les modelos de la realidad, mapas de territorios.
interesan más unas cosas y a otros otras, y Toda conceptualización parte de una percep-
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cada uno privilegia una parte de ese todo. ción, limitada por nuestra propia estructura
Por ejemplo, si a un conjunto de personas humana. A partir de una toma de conciencia
se les muestra un libro y se les pregunta qué de esa percepción obtenemos una idea, un
ven en ese objeto, algunos se fijarán en el concepto, una palabra, una acción. Toda
diseño de la portada porque esto es lo que les conceptualización parte de lo percibido y
interesa, y verán los colores y los contrastes es entonces una «construcción» humana, un
del dibujo; otros verán el título y el tema; mapa de la realidad, y no la realidad misma.
otros verán el nombre del autor, etc.; cada Lo que está en el mapa es la producción de
uno seleccionará una parte de aquello a lo que nuestros sentidos, de nuestra percepción de la
presta más atención, pero no lo «aprehende» realidad. Dado que es imposible captar totali-
todo, sino solo en parte; se construye así una dades en las cuales estamos nosotros mismos
representación del libro que será ligeramente incluidos, y debido a la limitación de nuestra
distinta para cada uno. capacidad perceptiva, cada percepción es un
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8 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 9
3. Irracionales: las que se conservan a pesar miembros su propia explicación sobre las
de las evidencias contrarias. estructuras y el significado que les dan a
las cosas. Estas informaciones originan el
Es evidente que los profesionales de la sa- nacimiento a ideas preconcebidas y a ge-
lud cuyas acciones están basadas, bastantes
neralidades respecto a la forma de ver y de
veces, en teorías un tanto dogmáticas y poco
relacionarse con los otros. Las ideas sociales
críticas, tratan de ajustar sus acciones a sus
preconcebidas, aprendidas a una edad muy
ideas preconcebidas, y llegan a deformar o a
temprana, son tan sutiles que a menudo son
tener ideas irracionales o estereotipos sobre
hasta desconocidas. Sin embargo, confie-
ciertas personas o situaciones. Veamos algu-
ren de manera importante el estilo personal
nas de estas creencias dogmáticas:
de comunicación y de interacción de una
1. Los enfermos mentales hospitalizados persona con otra. Por tanto, si estas gene-
son peligrosos. ralizaciones y estos estereotipos sociales
2. Las personas normales reflexionan antes interfieren en nuestras relaciones, pueden
de actuar. también modificarlas.
3. Si los padres educaran bien a sus hijos Si los profesionales no conocen estos as-
habría menos problemas de salud física pectos sociales de los pacientes, les resultará
y mental. difícil saber el sentido, a veces tan diferente,
4. Cuando una persona tiene problemas, lo que ellos dan al mensaje que reciben. Por
mejor que puede hacer es no pensar en ejemplo: sufrir en silencio el dolor como una
ellos. forma de expiar sus pecados.
5. Cuando una persona está pasando un due- Esta posibilidad de pensar en la impor-
lo, lo mejor es que salga y se distraiga. tancia de la construcción de la realidad de
6. La persona ha de ser capaz de resolver manera social nos permitirá conceptualizar
por sí misma sus problemas. cómo se dan históricamente los supuestos de
7. La persona que realmente quiere suici- realidad de los colectivos y cómo se asume
darse nunca lo comunica. lo cierto o lo falso dentro de cada dominio
8. Etcétera. específico del saber. Nos acerca a las deno-
minadas narrativas o relatos que explican
También observamos que, en general, los
todo lo que asumimos que es, lo que se puede
individuos buscan información sobre las
pensar, lo que se dice y es cierto, y lo que no
afirmaciones que ellos apoyan y, por el con-
se puede decir, pues no es posible.
trario, ignoran todas las que contestan. Po-
En suma, podemos apreciar, por todo lo
dríamos decir que, si un individuo aprende
dicho anteriormente, que los puntos se van
hechos nuevos y válidos sobre las afirma-
conjuntando para dar fin al mito de la reali-
ciones que él refuta, puede cuestionarse sus
dad objetiva. A partir de ahora, la teoría no
creencias actuales. Por el contrario, si no
intenta señalar las características del mundo
busca documentarse sobre los hechos que
tal cual es, sino que responde a una conven-
contesta, va lógicamente a evitar el cues-
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10 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
una nueva dimensión conceptual, un nuevo Este punto muestra una gran similitud
nivel de análisis de los procesos sistémicos con la terapia estructural, ya que en ambos la
de comunicación, a saber, la noción y la comunicación que cada uno mantiene con el
importancia de la narrativa. El campo de las medio es fundamental y es lo que contribuye
historias en común, compartidas por familias a definir la realidad.
(de hecho, ser parte de una familia implica Las construcciones que cada uno hace de
necesariamente compartir historias, descrip- la realidad, basadas en la experiencia, están
ciones, valores, anécdotas), por los grupos ancladas en convenciones sociales, cultura-
sociales (desde las ideologías compartidas les, lingüísticas, narrativas, históricas, rela-
por un grupo religioso hasta las mitologías cionales y discursivas que, si bien es cierto
compartidas por una cultura), son muy re- que cambian, no lo hacen de la noche a la
levantes para nuestro tema, pues permiten mañana. Es en el seno de estas convenciones,
a los profesionales de la salud comprender no precisamente efímeras, donde tiene senti-
el porqué de muchas de las actitudes y los do el ejercicio de la interacción y la relación
comportamientos de los pacientes, así como psicoterapéutica. Como afirmábamos con
también los motivos por los que tratamos de anterioridad, toda experiencia humana es
imponer nuestra forma de ver, captar y sentir candidata al significado personal que cada
la realidad. uno le da a un número mayor o menor de
discursos narrativos culturalmente disponi-
bles, y uno de estos discursos es el de los
Aspectos culturales
«problemas psicológicos».
De forma similar a los aspectos sociales, tam- En este sentido, resulta imposible deter-
bién la cultura enseña a los individuos cómo minar qué experiencias pueden derivar en
comunicarse, bien sea a través del lenguaje, problemas, dado que potencialmente puede
los gestos, los vestidos, la comida, la forma ocurrir con cualquiera de ellas. En nuestro
de utilizar el espacio, etc. contexto cultural, cualquier conducta puede
Los términos y las formas por medio llegar a ser etiquetada de problemática (quien
de los que conseguimos la comprensión del lo dude hará bien en consultar la sección de
mundo y de nosotros mismos son artefactos libros de «autoayuda» de cualquier librería
sociales, productos de intercambios situados especializada).
histórica y culturalmente y que se dan entre En la terapia, esto es sumamente impor-
las personas. tante, porque tiene que ver con el modo en
El grado en el que un dar cuenta del mun- que se construye algo problemático o no.
do o del yo se sostiene a través del tiempo Avilés (1998) nos narra la siguiente expe-
no depende de la validez objetiva de la ex- riencia vivida en un poblado de Guatemala:
posición, sino de las vicisitudes del proceso
social y cultural.
Era este un poblado donde bajaban a vender
Por tanto, la significación del lenguaje los indígenas de la región. Las mujeres ven-
en los asuntos humanos se deriva del modo dían sus mercaderías mientras los hombres
como funciona dentro de las pautas de las se iban a embriagar. Tomaban alcohol en
relaciones culturales. cantidades extraordinarias. El caso es que
Estimar las formas existentes de discur- al atardecer, cuando terminaban su venta
so consiste en evaluar las pautas de la vida las mujeres, los hombres ya dormían en la
cultural; tal evaluación se hace eco de otros calle completamente intoxicados. Ellas se
enclaves culturales. sentaban a su lado esperando que desperta-
La evaluación de las pautas de la vida ran. No hacían nada más. Los niños jugaban
a su alrededor como si nada ocurriera. Un
cultural nos hace comprender las formas par de horas más tarde los hombres abrían
en que estas se expresan en el discurso o la los ojos, se despabilaban, y todos se iban
comunicación, y nos permite apreciar que tranquilamente. Nadie construyó eso como
la cultura es mantenida gracias a la comu- un problema ni lo rotuló como alcoholismo.
nicación.
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 11
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12 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
La familia sería el sistema intermedio en- conocimiento del mundo, lejos de ser una re-
tre lo individual, lo natural, lo privado y lo que presentación de la realidad externa, existe en
pertenece a lo público, cultural y lo social, y se los acuerdos descritos acerca de la realidad.
entiende como una instancia de socialización. Los nuevos desarrollos pasaron a ser
llamados «cibernética de los sistemas ob-
servantes» o cibernética de segundo orden.
Aspectos individuales
Es evidente que tenemos que ir más
El primero de los focos a los que hacíamos allá de la Gestalt de la objetividad y la sub-
referencia es la consideración batesoniana jetividad. La cibernética de la cibernética
de la mente no como producto de un sistema propone que la alternativa es la ética. Desde
nervioso contenido en un organismo, sino una perspectiva ética no nos preguntamos
como conjunto de pautas de organización si somos «objetivos» o «subjetivos»; en
y autorregulación de cualquier sistema. En lugar de ello, admitimos el nexo necesario
este sentido, la mente no es ni mucho menos entre el observador y lo observado, y ello
inmanente al individuo, sino un proceso dis- nos conduce a examinar cómo participa el
tribuido de manera social y ecológica. observador en lo observado. Von Foerster
Según el famoso ejemplo de Bateson (1987) señala que el tránsito hacia una pers-
(1972): pectiva participativa y ética es el pasaje
de un pensamiento causal unidireccional
a un pensamiento sistémico mutualista; de
Consideremos un hombre que derriba un
árbol con un hacha. Cada golpe del hacha la preocupación de las propiedades de lo ob
es modificado o corregido de acuerdo con servado al estudio de las propiedades del
la hendidura que ha dejado el golpe ante- observador. Afirma que Kant fue el iniciador
rior. Este proceso autocorrectivo (es decir, de este desplazamiento paradigmático y sos-
mental) es llevado a cabo por un sistema tiene que él sustituye nuestra preocupación
total árbol-ojos-cerebro-músculo-hacha- por la objetividad, colocando en su lugar la
golpe-árbol, y este sistema total es el que preocupación por la responsabilidad. Como
tiene características de mente inmanente. cada cual prescribe determinadas maneras de
puntuar el mundo, es importante examinar
Los construccionistas trabajan funda- las intenciones que están en la base de esos
mentalmente con lo verbal; esto es debido a hábitos de puntuación. En síntesis, las distin-
que creen que el lenguaje es la herramienta ciones que establecemos a fin de conocer el
más importante para nuestra construcción del mundo surgen de una base ética, no objetiva,
mundo y de nosotros mismos. «Lo que de- no subjetiva. Porque lo que percibimos es
cimos o narramos influye en nuestro campo trazado por nuestra manera de conducirnos
de acción» (Gergen, 1996). y nuestra manera de hacerlo se atiene a las
Creamos el mundo que percibimos, no por- restricciones de lo que percibimos.
que no exista una realidad externa, sino porque La metacomunicación es también otra
seleccionamos y remodelamos la realidad que posible forma de salida de la maraña en
vemos para conformarla a nuestras creencias que las personas nos enredamos en muchas
acerca de la clase de mundo en el que vivimos ocasiones, con nuestros mutuos y múltiples
(Bateson, 1991). problemas. Al metacomunicar (comunica-
Un nuevo desequilibrio y un nuevo salto ción acerca de la comunicación) salimos de
evolutivo en el modelo cibernético fue in- la situación repetitiva que impide en muchas
troducido por la postulación de que la obser- ocasiones que podamos ver con claridad y
vación afecta a lo observado. El observador, globalidad el problema; por ello, esto a veces
con sus limitaciones, supuestos y prejuicios, es importante como primer paso en la reso-
organiza lo observado. Puede, así, argüirse lución de problemas.
que no existe una descripción objetiva de Desde esta metacomunicación, los in-
la realidad. El argumento, por cierto, acaba dividuos con trastornos de conducta, en el
por cuestionar qué es la realidad misma. El modelo sistémico, dejan de ser catalogados
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 13
comunicación.
Otros aspectos
2. La comunicación interpersonal: pode-
Nuestra captación de la realidad, lógicamen- mos decir que incluye todo lo que vamos
te, no se agota en los aspectos expuestos. Así, a decir sobre la comunicación entre dos
por ejemplo, vemos cómo la realidad, y por personas, o en la relación terapéutica con
consiguiente, nuestra forma de interaccionar, pacientes y familia, etc., y que nosotros
puede estar condicionada por los filtros de abordaremos desde la corriente humanista.
la filosofía de vida, las creencias, la religión 3. La comunicación pública: es la que tiene
o las situaciones personales que cada uno lugar entre una persona y varias otras. La
puede estar viviendo, como miedos, preocu- mayor parte del tiempo toma la forma
paciones, ansiedades, cansancio, sueño, etc. de un discurso público. Diríamos que
Todos constatamos que nuestro estado es la comunicación que más se realiza
anímico condiciona nuestras relaciones. comúnmente.
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14 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
MODELOS DE COMUNICACIÓN
HUMANA
Una de las mejores maneras de ilustrar la na-
turaleza y los elementos de la comunicación
humana es la utilización de un modelo o de
FIGURA 1-1 Comunicación-interacción.
una representación visual.
Los modelos se emplean con fines diver-
sos. Así, la carta geográfica de un territorio Comunicación-interacción
preciso puede ser utilizada para planificar
La comunicación interaccional pone de ma-
una visita. En el campo de la salud, un
nifiesto el carácter recíproco y mutuo de la
gráfico puede ser utilizado para evaluar
comunicación. Implica a las dos personas que
la situación global del paciente (p. ej., la
quieren entrar en relación y que deben ser capa-
temperatura). Sin embargo, los modelos no
ces de ponerse cada una en el puesto de la otra.
nos proporcionan una visión completa de
Cada uno de los interlocutores intenta percibir
todos los elementos, pero sí un resumen que
el mundo del otro, ver las cosas desde la pers-
nos facilita la comprensión. Su uso puede a
pectiva del otro. Por tanto, la comunicación se
veces darnos una simplificación equivocada
hace en los dos sentidos, y no en sentido único,
de la realidad.
como en la comunicación-acción. Es, por tanto,
Veamos algunos de estos modelos.
un proceso circular en el que los participantes
deben a su vez ser emisor y receptor (fig. 1-1).
Comunicación-acción Es evidente que esta perspectiva es me-
nos reduccionista que la anterior y, por tanto,
La comunicación en tanto que acción forma permite muchísimos menos errores. Sin em-
parte de una concepción lineal del proceso. bargo, aún aparece como muy simple, cuando
Esta es, en sentido único: A habla a B. Los es evidente que la comunicación es mucho
interlocutores intentan transferir directamen- más compleja que una simple transcripción
te a los otros sus pensamientos e ideas. La de una retroalimentación o de feedback.
comunicación se realiza de una persona a
otra.
Detrás de esta concepción lineal hay dos Comunicación-transacción
hipótesis importantes: En la comunicación-interacción hay una in-
1. Es importante la habilidad para comuni- fluencia mutua entre los dos comunicantes.
carse. En una transacción, los participantes son los
2. Se transmite directamente la significación dos a la vez comunicadores. Es un proceso
de los hechos. más bien de influencia mutua que de inter-
venciones por turno.
Lógicamente, en este tipo de comunicación En la perspectiva de la comunicación
no se tienen en cuenta las variables enuncia- transaccional, los participantes están en re-
das anteriormente (percepción, valores…). lación el uno con el otro en el momento en
El receptor tiene un rol pasivo que no afecta el que comunican. Por ejemplo:
para nada al emisor. El énfasis se pone sobre
todo en transmitir bien los mensajes. Si hay
incomprensiones, se le echa la culpa, o bien En cada díada de comunicación hay al me-
al emisor por no transmitir bien su mensaje, nos seis personas implicadas. A como él se
ve; A tal como lo ve B; A como piensa que
o bien al receptor porque no ha sido capaz B lo ve; B como él se ve; B tal como es visto
de comprenderlo bien. Es evidente que es- por A, y B como piensa que A lo ve. Hay,
te modelo de comunicación es insuficiente pues, aparte del contenido, un mensaje que
e impreciso y que, lamentablemente, es el concierne a la relación existente entre los
que más utilizamos, de ahí la cantidad de los dos comunicantes.
llamados «errores médicos».
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 15
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16 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 17
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18 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
decir, cuando ninguno de los interlocutores Para tener la capacidad de dar informa-
acepta ser sobrepasado por el contrario, cada ción a los otros hemos de tener nosotros las
uno intenta puntuar más alto que el otro, salir- ideas claras, a fin de poderlas comunicar con
se con la suya, llevar razón, lo cual conduce claridad. Necesitamos lograr que los otros
forzosamente a una rivalidad y estado de gue- sepan qué está sucediendo dentro de noso-
rra. El mecanismo más corriente empleado en tros, es decir:
este caso es el rechazo.
También una complementariedad rígida • «Lo que hemos aprendido o lo que cree-
mos saber.
lleva a una especie de «destrucción», simbio-
sis, locura compartida. En el caso de una rup- • Lo que esperamos de los otros.
tura de relación complementaria, observamos • Cómo interpretamos lo que otros hacen.
con frecuencia el mecanismo de la negación • Cuál es la conducta que nos agrada y la
que nos desagrada.
(del otro y de sí mismo, de aquí a veces las
tentativas de suicidio). • Cuáles son nuestras intenciones.
• Cuál es la imagen que los otros nos dan
de nosotros mismos.» (v. Satir, 1991).
Cuarto axioma:
«La naturaleza de una relación depende de la
puntuación de secuencias de comunicación entre Tener presente el significado
los dos interlocutores.» que damos a las palabras
En una interacción, los interlocutores puntúan
siempre unas secuencias más que otras, en fun- Sabemos que una misma palabra o una misma
ción de su convicción, partiendo del principio frase puede tener significados diferentes. Por
que cada uno cree que «no existe más que una ejemplo, la palabra «madre» puede significar
sola realidad, el mundo tal cual yo lo veo o una mujer que da a luz, pero también una mujer
percibo». La puntuación sirve para estructurar cálida, comprensiva, amable, sacrificada, etc.
la manera de comportarme. Las puntuaciones No debemos olvidar que las palabras son
continuas y repetitivas van a estructurar y de- abstractas, son símbolos que sustituyen a las
finir un rol, el cual será admitido por ambos, cosas. Si un individuo no se da cuenta de que
lo cual quiere decir que los interlocutores es- las palabras son solo abstracciones, corre el
tablecerán entre ellos modelos de intercambio, peligro de caer en ciertas generalizaciones,
y estos modelos serán a su vez como las reglas eliminaciones o distorsiones.
implícitas que regirán el intercambio de roles. Veamos algunos matices de cada una de
Así, por ejemplo, un individuo que adopta ellas.
un comportamiento en función de la predic- Generalizaciones
ción del otro entraña un efecto complemen-
tario por parte del otro que en cierto modo le Generalización excesiva
violenta o le fuerza a adoptar ciertas actitudes Se incurre en este error cuando se elabora una
precisas. Y, por tanto, el interesado está per- regla general, o una conclusión, a partir de
suadido que no hace más que reaccionar a la uno o varios hechos aislados. Por ejemplo,
actitud del otro, sin pensar que puede muy a partir de una experiencia dolorosa se con-
bien ser él quien ha provocado esta actitud. cluye que lo mismo le va a ocurrir inevita-
blemente siempre. Se piensa que si es cierto
LA COMUNICACIÓN en un caso, se puede aplicar a cualquier otro
ES UN PROCESO DE DAR caso que sea mínimamente similar.
Suele pensarse y expresarse en términos
Y RECIBIR INFORMACIÓN
de:
(V. SATIR, 1991)
Las personas que desean obtener la informa- Siempre: «Esto siempre me sucede a mí».
ción que necesitan de otros tienen que comu- Todos: «Todos los hombres van a lo mismo».
nicarse con claridad. Como seres humanos, Nadie: «A nadie le gusto».
sin comunicación no podríamos sobrevivir.
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 19
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20 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 1 Generalidades sobre la comunicación 21
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22 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo 2
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24 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 2 Importancia de una buena observación para... 25
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26 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
La observación no es un fin en sí misma, pero 1. ¿Qué síntomas debo buscar en este pa
sí un medio indispensable para, en nuestro ciente?
caso, proporcionar cuidados de calidad. 2. ¿Qué medidas de seguridad debemos
Distinguimos principalmente los objeti emplear con este paciente? ¿Se han em
vos siguientes: pleado ya?
3. ¿Cómo es el medio ambiente en el que va
1. Precisar las necesidades y los problemas
a vivir el paciente cuando haya concluido
del enfermo con el fin de desarrollar un
su estancia hospitalaria?
plan de cuidados adecuado.
4. ¿Qué está haciendo cada paciente en este
2. Ayudar al profesional correspondiente a
momento?
establecer un diagnóstico, un tratamien
5. Etcétera.
to, etc.
3. Darse cuenta de la eficacia (o ineficacia) Seamos cuidadosos al observar todos los as
del tratamiento prescrito por el profe pectos de la atención al paciente y su medio;
sional. esto incluye la atención que está recibiendo
4. Recoger información del paciente para y la que ha recibido.
después compartirla con los otros miem
bros del equipo. Considere a cada persona
5. Prevenir las complicaciones y sus secue un individuo
las con el fin de observar los signos de la Si ha de determinar qué observar en la aten
enfermedad, etc. ción a un paciente, necesita también pensar
6. Y, sobre todo, observar a la persona en en sus necesidades individuales. Cuando ob
ferma, ya sea que esta manifieste o no serve al paciente no olvide contrastar lo que
ciertos síntomas o signos de la enferme observa en él con su mundo referencial, ya
dad, con el fin de que pueda expresar, si que esto le permitirá comprenderlo mejor y
es posible, lo que ella vive, siente, ex hacer interpretaciones que no sean gratuitas.
perimenta, etc.
7. Verificar en la comunicación si lo que nos Trate de ser objetivo en lo que ve
dice de forma verbal se corresponde con
su comunicación no verbal. Es un hecho experimentado frecuentemente
que si varias personas observan un determi
nado incidente y luego intentan describirlo,
ASPECTOS QUE SE DEBEN TENER aunque haya puntos comunes, se constata
EN CUENTA AL HACER UNA que hay versiones diferentes. Todas las per
OBSERVACIÓN sonas tendrán su propia observación e inter
pretación del incidente, o incluso más, todas
La observación no es algo innato, estarán seguras, dentro de sí, de que lo que
es un aprendizaje que hemos vieron sucedió como lo describen.
de realizar Esto nos lleva a la conclusión de que la
observación objetiva como tal es muy difícil,
Cuántas veces nos ha pasado que, tenien pues tiene mucho de subjetividad (debido a
do el objeto delante de nuestros ojos, no lo la tendencia frecuente que tenemos de pro
hemos visto, y sin embargo el objeto estaba yectar e interpretar), pero tanto más tendrá
ahí desde el primer momento. Esto también de subjetividad cuanto menos observemos y
nos pasa respecto a los pacientes. Veamos verifiquemos lo que hemos observado con el
algunas sugerencias que pueden ayudarnos fin de distinguir lo que es observación de lo
a aprender a observar mejor: que es interpretación.
Por tanto, es difícil que las personas sean
Tenga cierta idea de lo que busca objetivas en sus observaciones, debido a que
antes de iniciar su observación sus actitudes, motivaciones, cansancios, an
Pregúntese continuamente qué, cómo, dónde, siedades, preocupaciones, etc., las obligan in
cuándo, por qué, etc. Por ejemplo: conscientemente a pasar por alto o a exagerar
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Capítulo | 2 Importancia de una buena observación para... 27
ciertas cosas. No es raro que una persona solo observación a la proyección, y así, cuando
vea lo que desea ver. está irritado y cansado, es posible que le
Esta objetividad de la observación aún es alteren algunos incidentes, mientras que si
más subjetiva cuando se observa a alguien a está contento, los pase por alto.
quien se aprecia o desprecia intensamente.
Esto es debido a que lo que el individuo Busque relaciones o asociaciones
cree que ve, con frecuencia, está influido por entre lo que ve y lo que parece
ideas, creencias o emociones preconcebidas ser la situación global
acerca de la situación global, tendiendo a Cualquier incidente está formado por varias
generalizar y buscar ejemplos para demostrar acciones separadas, cada una de las cuales
que tiene razón (recordemos lo señalado en el tiene diferentes significados cuando se dis
capítulo 1, en el apartado «Factores que influ tancian del incidente total. Por tanto, es nece
yen en la comunicación»). Así, por ejemplo, sario observar no solo los pasos individuales
si el profesional de la salud piensa que todos de la atención de cuidados, sino considerarlos
los pacientes son «pacientes = pasivos», verá en relación con la asistencia global requerida
solo a los que verdaderamente se muestran por el paciente.
así para, de esta manera, confirmar su idea. Observe cómo se adaptan todos los as
Otra razón de esta falta de objetividad se pectos de la atención; indique, en cierto gra
debe a que la mente de una persona tiende a do, la comprensión que el profesional tiene
completar parte de la acción que no ve, ha en relación con las necesidades del paciente.
ciendo que los actos que observa la persona Precise si cada una de las partes de la aten
tengan sentido para ella. Por ejemplo: un ción se ha dado correctamente, pero observe
profesional «obsesionado» con la gravedad también si se ha empleado la sucesión de
de algún paciente, si oye que está respirando pasos y procedimientos adecuados.
como quien ronca, puede creer que está en Interésese por lo que ve. El interés le
estado de coma e incluso llegar a despertarle; ayuda a hacer más completa y exacta su ob
si este tarda en despertarse, puede llegar a servación de los detalles.
afirmar que el paciente estaba en verdadero Muestre interés por sus pacientes y por la
estado de coma. atención de cuidados que reciben del equipo,
Cuando una persona comprende la impor aumente su capacidad para ver lo que hacen,
tancia de ser objetiva en sus observaciones, ya que podrá prestar mayor atención a los
también comprende que se deben obtener to pormenores de su trabajo. Si se concentra
dos los hechos para poder justificar cualquier cuando busca conscientemente detalles, po
conclusión. Aceptar que algo ha pasado o drá observar mejor.
que algo es verdad, sin primero obtener datos
sustanciales, invalida cualquier conclusión
basada en estos supuestos. Se deben reunir Tipos de observación
todos los hechos antes de llegar a cualquier
Podemos distinguir varios tipos de obser
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
conclusión.
vación:
Intente ser exacto y objetivo en sus obser
vaciones, tanto de los pacientes como de su 1. La observación no dirigida. Esta obser
grupo. Trate de obtener todos los hechos. An vación no se realiza de forma sistemáti
tes de llegar a cualquier conclusión, tenga da ca, sino involuntaria. Consiste en estar
tos suficientes. Se debe, también aquí, evitar prestos a escoger los hechos significa
el máximo de generalidades, eliminaciones tivos que pueden aparecer en el campo
o distorsiones (el hecho de tener un olvido de la observación. Esta actitud podría
no significa que la persona sea olvidadiza). traducirse como la capacidad de estar
Saber que sus actitudes y emociones atento a todo lo que pasa a su alrededor,
probablemente modifiquen lo que usted ve permitiendo así la acumulación de una
debe hacerle cuidadoso en sus observacio cantidad de información que la persona
nes. No olvidemos el desliz de pasar de la no ha seleccionado ni sistematizado, pero
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28 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 2 Importancia de una buena observación para... 29
relacionar con los estados emocionales y la cambios, aunque ella no los perciba debido
actividad motora. Asimismo, conviene que el a que está muy involucrada en el mundo del
profesional observe la calidad del lenguaje paciente. Sin embargo, debemos admitir que
del paciente (incoherente, lógico, sistemáti los individuos cambian continuamente. El
co, silencioso, circunstancial, etc.). enfermo que hemos observado ayer no es el
La observación del comportamiento mismo que el que observamos hoy (cuando
verbal del paciente permite a veces detectar esto acontece, es decir, cuando creemos que
ciertos elementos de su personalidad. Por el enfermo de ayer está igual que hoy, existe el
ejemplo, constatamos que bastantes personas gran peligro de que el profesional actúe
evitan hablar de sí mismas o manifestar sus de forma rutinaria). También la enfermera o
problemas hasta el final de la entrevista. Estas el profesional de la salud cambian. ¿Cómo
personas necesitan observar a su interlocutor resolver este problema? Es preciso tomar
para saber si pueden o no confiar en él. conciencia de esta tendencia que tenemos a
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30 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
descuidar lo que nos es familiar, a tomarlo Es decir, la mayor parte tienden a hacer
como algo adquirido. Cada día debemos es una interpretación personal más que una obser
forzarnos en ver y percibir a las personas y vación de lo que han visto, como por ejemplo:
las cosas con ojos nuevos, y desde perspecti
vas diferentes. Esto quiere decir: tratar de ver,
«Miraba el reloj», «se movía paseando por
mirar, escuchar, etc., a las personas familiares la sala», «miraba al público», etc.
como si fuera la primera vez que las vemos,
las escuchamos, etc. Después de todo, es una
Esto sí que es una observación, pues to
gran verdad que cada día y cada momento
dos lo pueden constatar. Esto nos demuestra
constituyen una nueva situación y, por tanto,
nuestra tendencia a interpretar cualquier cosa
no caben la familiaridad ni la rutina.
que vemos, pues el lenguaje no verbal es tan
rico que se presta a múltiples interpretaciones.
Incapacidad de distinguir los datos Generalmente, en nuestra vida cotidiana sole
brutos de las interpretaciones mos hablar más sobre lo interpretado que sobre
lo que hemos observado, de aquí que muchas
Una dificultad suplementaria a la observación veces sintamos un gran conflicto en nuestras
parece estar en la ineptitud para distinguir lo relaciones, pues damos por objetivos los datos
que uno ve, entiende, siente, toca, etc., a par interpretados.
tir de las interpretaciones personales que pue
de dar a los fenómenos, los acontecimientos Incapacidad de utilizar todos
o las situaciones. Por ejemplo, un profesional los recursos de sus propios sentidos
dice que un determinado paciente:
Cuando uno desea reunir varios datos brutos,
no basta con ver y entender; es preciso que
«Parece estar inquieto.»
contribuyan los otros sentidos. Es curioso
cómo nos limitamos en la observación. Así,
Parece estar inquieto constituye una in por ejemplo, cuando he pedido a algunos es
terpretación de lo que él ha visto, entendido tudiantes que observaran una planta, unos
u oído en su encuentro interpersonal. Sin han descrito la forma, lo que han visto, pero
embargo, lo importante es que el profesional la mayoría no la tocan, la huelen o la sienten.
reúna los datos brutos que ha observado y que Es decir, en la observación, con frecuencia
le han conducido a tal interpretación. limitamos nuestros sentidos.
Una interpretación no es un dato bruto.
Insistimos en que hay muchos profesionales
que confunden los datos observados con sus Incapacidad de cambiar
interpretaciones, y por consiguiente, extraen de perspectiva
sus conclusiones, no de lo que han observado, Otra de las limitaciones de nuestra observa
sino de lo que han interpretado. Esto lo hemos ción es que con frecuencia nos paramos a ver
experimentado con frecuencia en las clases, las cosas desde una sola perspectiva y, por
cuando durante treinta segundos le decimos tanto, limitamos enormemente la visión total
a un estudiante que exprese al resto de la del objeto percibido; con ello falseamos la rea
clase lo que quiera sin palabras. Asimismo, lidad ya que, a pesar de tener una visión par
indicamos a los otros estudiantes que lo ob cial de esta, la tomamos como si fuera total.
serven. Después, les preguntamos lo que han Es imprescindible que aprendamos a ejercitar
observado y nos dan respuestas como éstas: todos nuestros sentidos, sin limitarnos a ver
las cosas desde un solo punto de vista.
«Estaba muy nervioso», «tenía prisa», «es-
peraba a alguien», «tenía angustia», «es- Nuestro grado de ansiedad
taba aburrido», «estaba deseando que se
acabara», etc. Sabemos que un cierto grado de ansiedad
es bueno, pues nos pone en estado de alerta
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Capítulo | 2 Importancia de una buena observación para... 31
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32 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
por tanto, de no ver a la persona tal cual es, Hay diversos niveles de roles:
sino la imagen que nos hemos hecho de ella. 1. Esperado en el ámbito sociológico (estatus
social, sexo, edad, modelo cultural, etc.).
Nuestra percepción es global 2. Institucional.
3. Funcional (en un grupo o una empresa).
No percibimos elementos aislados ni sumas 4. Esperado en el ámbito de las relaciones
de elementos, sino conjuntos. Percibimos interpersonales.
hechos significativos y percibimos de manera 5. Percibido (el rol que uno cree desem
diferente según el cuadro de referencia utili peñar).
zado. Por ejemplo, si hay una serie de puntos 6. Desempeñado (efectivamente desempe
formando un círculo, no nos quedamos en ñado).
los puntos en sí, sino que automáticamente
decimos que es un círculo. Las dificultades están unidas a la adaptación
al rol, al cambio de este, a su imprecisión,
al conflicto de rol, a lo que se espera de él
Nuestra percepción es selectiva (Pigmalión, anticipación de un rol).
Nuestros aparatos receptores son imprecisos,
fluctuantes, variables. Cada uno tiene su pro
pia manera de ver las cosas a causa de sus Otras dificultades del espíritu
propias necesidades u objetivos personales de observación
(conscientes o no). Varios factores pueden modificar las obser
Por ejemplo, cuando uno tiene hambre o vaciones y, por consiguiente, las interpreta
sed, no ve más que los restaurantes, los bares, ciones; señalamos algunas:
etc., necesidades que están ligadas a lo que
esperamos y también a nuestros miedos, a 1. La falta de disponibilidad: espíritu no
causa de los efectos de: muy libre que está preocupado por pro
blemas internos (enfermedad, baja au
1. Centración: sobrestimar o sobreevaluar toestima, etc.).
el aspecto en el cual centramos nuestra 2. Ideas preconcebidas: etiquetas que ha
atención. cen que no veamos lo que es sino lo que
2. Asimilación: datos asemejados a otros, creemos o, en cierto modo, queremos ver.
cuando deberían ser diferentes. 3. Interpretación: antes de describir aspec
3. Efecto de contraste: diferencias míni tos «objetivos» de esa situación o per
mas, pero bien señaladas, que pueden ser sona, interpretamos.
exageradas. 4. Falta de curiosidad, de interés, de deseo
4. Anclaje: efecto parásito, en el que inter de profundizar.
viene implícitamente un valor de referen 5. Medio ambiente: ruido, temperatura, luz
cia o de juicio implícito. desfavorable, etc.
5. Efecto de halo: tendencia a estar condi
cionado por los otros, por impresiones En conclusión, hemos de tener en cuenta:
globales o por respuestas o conocimien 1. El proceso de la observación comienza
tos anteriores, sin que tengan relación por un aprendizaje:
directa con lo que se está observando en a. Aprender a percibir (tener en cuenta
este momento. los mecanismos de la percepción).
b. Aprender a observar los hechos sig
Nuestra percepción está nificativos (elección).
c. Aprender a recoger y anotar si
condicionada por los roles sociales
guiendo un método sistemático que
Esto también es un fenómeno de proyección. favorezca a la vez la comunicación y
En la observación, los roles tienen igualmen la explotación ulterior de los hechos
te mucha importancia. observados.
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Capítulo | 2 Importancia de una buena observación para... 33
2. Principios generales para una buena ob ción, y hay personas a las que les cuesta
servación objetiva: mucho autoobservarse; esto implica mu
a. Precisar el objeto de observación: cho trabajo de crecimiento personal.
– Qué.
– Cuándo. CONCLUSIÓN
– Quién.
– Cómo. No hemos pretendido en este tema abordar
– Dónde, etc. toda la riqueza de la observación, sino dar
b. Registrar las observaciones sin inter- algunas pinceladas o elementos que nos
pretarlas: ayuden a tener en cuenta la importancia y
– Darse los medios de ser lo más la dificultad de hacer una buena observación
objetivo posible, por ejemplo: para una buena comunicación. Recordemos
○ Mediante el trabajo en grupo. que nuestra comunicación está condicionada
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34 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
por lo que observamos e interpretamos, sea Fast JB. El lenguaje del cuerpo. Barcelona: Kairós;
sobre la realidad o sobre las personas. 1998.
Giger Davidhiza R. Transcultural nursing. Assessment
En todos nosotros, en tanto que profe and intervention. St. Louis: Mosby; 1995.
sionales de la salud, está el tener una actitud Guidano VF. Self-observation in constructivist psycho
esencial hacia la observación; es gracias a es therapy. En: Neimeyer RA, Mahoneyf MJ., editors.
ta que podemos escoger y reconocer los lazos Constructivism in psychotherapy. Washington D.C:
APA; 1995.
que existen entre las personas y las cosas. PeñA B. Métodos científicos de observación en Educa
La observación permite identificar las ción. Madrid: Visión Libros; 2011.
necesidades del paciente y la adaptación de Tazón Ansola MP, García Campayo J, Aseguinolaza Cho
nuestra actitud en función de su comporta pitea L. Relación y comunicación. Madrid: DAE; 2000.
miento y sus necesidades. Ulla S, Arranz P, Argüello MT. Dificultades de co
municación percibidas por profesionales de enfer
Para que el trabajo que realizamos como mería en un hospital general. Enfermería Clínica
buenos profesionales tenga todo su valor, es 2002;12:217-23.
te debe ser compartido y relatado en equipo. Valverde Gefaell C. Comunicación terapéutica en enfer
De aquí la importancia de la información mería. Madrid: DAE; 2007.
y la comunicación objetiva y exacta.
BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA
BIBLIOGRAFÍA ESPECÍFICA Hirsch H, Berezosky I. Construcción de redefinicio
nes: base de todo proceso terapéutico. In: Hirsch H,
Cibanal L, Arce MC. La relación enfermera-paciente. Rosarios H, editors. Estrategias psicoterapéuticas
Alicante. 1991. institucionales. La organización del cambio. Buenos
Bandler R, Grinder J. La estructura de la magia. Santiago Aires: Nadir; 1987.
de. Chile: Cuatro Vientos; 1980. Maturana H. El árbol del conocimiento. Barcelona:
Fast JB. Hablando entre líneas. Barcelona: Kairós; 1980. Debate; 1990.
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Capítulo 3
La comunicación no verbal
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
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36 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
comunicativos que pueden ser incluso más A este respecto, con cierta frecuencia es
importantes que la propia expresión verbal. cuchamos a algunos pacientes decir: «Cuan
La comunicación no verbal es importante do uno tiene una enfermedad seria te vuelves
en el campo de la salud, principalmente en como paranoico, no te fías de lo que te dicen,
dos ámbitos: por una parte, la sensibilidad crees que te están engañando, ocultándote
que tiene el propio paciente para captar las la verdad. Incluso a veces hablan de otros
señales no verbales emitidas por las perso pacientes y tú interpretas que están hablando
nas que le rodean, incluidos obviamente los de ti, tal es la poca confianza que tienes [en
profesionales de la salud —pues debido a los profesionales y los familiares] de que te
esa ley del silencio, el paciente desconfía de digan la verdad, pues en el fondo esto último
que tanto familiares como profesionales le es lo que con frecuencia pasa».
estén diciendo la verdad a nivel verbal—, y
por otra parte, la expresividad no verbal que
Expresividad
manifiestan los pacientes y que tan útil puede
y suele ser para el sanitario. Dado el gran número de emociones de dife
rentes clases que se suelen experimentar en
una situación de enfermedad y que no son
Sensibilidad
fáciles de sentir en el mismo grado en la vida
Ante todo, debemos recordar que, general cotidiana (miedo, dolor, ansiedad, insegu
mente, la enfermedad crea en el paciente un ridad, incertidumbre…), suele ser habitual
estado de fuerte ansiedad que se acompaña que el paciente experimente un aumento
de incertidumbre, la cual le lleva a buscar considerable en su capacidad de expresi
en el medio ambiente indicios que le indi vidad por vía no verbal. Es más, sabemos
quen cuál es la situación real de su salud o que las emociones se expresan generalmente
enfermedad. De esta manera, en el marco por vía no verbal, máxime en el caso de las
sanitario y particularmente en el hospitalario, emociones asociadas a la enfermedad, ya
el paciente trata de buscar información acerca que el paciente posee, por lo general, una
de su enfermedad a través de todos los indi falta de entrenamiento en cuanto al control
cios que le pueden suministrar las personas u ocultamiento de estas emociones en el
con las que interactúa, y particularmente, los marco sanitario. Además, la manifestación
propios profesionales de la salud (médicos, no verbal de tales emociones es más probable
enfermeras, trabajador social, fisioterapeutas, aún, debido a las dificultades que los pacien
auxiliares…). Y es que, en el ejercicio de la tes suelen tener para expresar verbalmente
medicina o la enfermería, se plantean nume sus sentimientos relacionados con ciertos
rosas situaciones en las que se produce un temas que le resultan embarazosos, y/o para
ocultamiento de la información al paciente, enfrentarse a situaciones suscitadas por la en
de aquí que este preste atención a los indicios fermedad. Incluso existen casos extremos en
no verbales de posibles engaños con el fin los que el sistema de expresión verbal del
de poder obtener alguna información. En paciente resulta afectado por la enfermedad
función de ello, el paciente se crea unas ex hasta quedar totalmente deteriorado, y enton
pectativas acerca de la gravedad de su propia ces el sistema de comunicación no verbal se
enfermedad, del interés que el profesional convierte, no solo en la principal, sino en la
de la salud tiene por él, etc. Los pacientes única vía de comunicación entre el paciente
son especialmente propensos a obtener infor y su entorno.
mación en la que basar estas expectativas, a
través de indicios no verbales. Los pacientes
EL CONOCIMIENTO SOCIAL
observan las acciones no verbales de quie
nes los atienden y, en función de los signos Cuando algún desconocido se acerca a noso
que ven, interpretan si los profesionales los tros, ocurren los siguientes procesos y fenó
aprecian, los respetan, les dicen la verdad, menos que constituyen el área de estudio de
esperan que mejoren, los rechazan, etc. la cognición social:
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 37
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38 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 39
resultando en unas ocasiones más eficaz que Vamos a hacer un pequeño recorrido por
el lenguaje verbal y en otras —debido a una las principales actitudes de nuestra comuni
falsa interpretación— en causa de disgustos. cación no verbal.
El lenguaje no verbal puede transmitir
en ocasiones intenciones más profundas La mirada
que el lenguaje verbal, por ejemplo, ten
derle la mano al enfermo, unas lágrimas, Se trata de uno de los elementos de la co
un apretón de manos, una mirada de cariño municación no verbal que más información
o de ira, etc. aporta, si se sabe interpretar adecuadamente,
Continuamente hablamos y transmitimos pues cumple una serie de funciones, entre
más información con el lenguaje no verbal ellas: la regulación del flujo de la comunica
que con el verbal. Nuestra manera de andar, ción, la obtención de un feedback acerca de
de sentarnos, de comer, de mirar, de mover cómo los demás reaccionan a una comunica
nos, etc., está comunicando. ción verbal, a la expresión de las emociones
También sabemos que es más fácil en o a la comunicación de la naturaleza de la
gañar con el lenguaje verbal que con el no relación (diferencia de estatus, etc.).
verbal. Por ejemplo: El hecho de mirar a alguien directamen
te a los ojos tiene por efecto provocar en el
interlocutor un cierto grado de excitación
Profesional: Buenos días, señor Sánchez, fisiológica y emotiva, provoca un «cierto
¿cómo está esta mañana?
nivel de activación», de atención y escucha.
Paciente: Estoy bien, gracias (y dice es
to con un gesto o expresión facial que de
Una mirada intensa a los ojos del otro co
muestran ansiedad, miedo o preocupación). munica sentimientos intensos, como pedirle
algo. Por ejemplo, la mirada de una persona
Por otra parte, el paciente puede pre que sufre… provoca en nosotros un senti
guntarnos: «Por favor, ¿es grave mi situa miento de tristeza, impotencia, etc. Es decir,
ción?». El profesional de la salud puede de con la mirada, la persona se siente implicada,
cirle que no y, sin embargo, con el lenguaje se activa, le «obligamos» a responder.
no verbal —y a veces sin darnos cuenta— le Si el interlocutor capta con la mirada lo
indicamos que sí es grave, porque el len que queremos decir, según el sentimiento,
guaje no verbal nos exige más control y es puede provocarle acercamiento o huida.
más difícil de simular, aunque a veces el Cuanto más cercanas se sientan las
paciente, por sus mecanismos de defensa y personas, más suelen mirarse a los ojos. En
protección, no quiera reconocer los signos el ámbito hospitalario, el hecho de que el
no verbales que le damos. profesional de la salud no mire al paciente
También hemos observado que la sim a la cara, para así no interaccionar con él,
patía y la antipatía se comunican más con el forma parte de un proceso de despersonali
lenguaje no verbal que con el lenguaje verbal. zación, debido tal vez al exceso de trabajo,
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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40 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
por tanto, hacen que el interlocutor se sienta uestran más afirmativas en el tono de voz
m
también incómodo. que en el contenido de la conversación.
Por esto se aconseja que la mirada sea La importancia de la voz como instru
regulada (dos a tres segundos), pues si dura mento de comunicación no verbal estriba
más de cinco segundos, a veces, según las en su capacidad para transmitir información
personas y las situaciones, se vive como una acerca de los estados emocionales del que
violación. habla, con las implicaciones que ello tiene
Conviene mirar a menudo con poca in en el campo de la salud. Así, por ejemplo,
tensidad y duración, pues de lo contrario hay una relación negativa entre la ira exis
nuestro interlocutor se puede sentir molesto, tente en la voz de un profesional y su eficacia
pero también sabemos que mirar a los ojos de en el tratamiento de algunos pacientes. Por
nuestro interlocutor es esencial para manifes otra parte, el tono de la voz y una serie de
tarle interés y que le escuchamos, así como señales sutiles relacionadas con ella son es
para atraer y retener su atención. pecialmente importantes cuando el que ha
Se trata, por tanto, de mantener un cierto bla pretende, o bien engañar, o bien ocultar
equilibrio entre mirar a los ojos y mirar a otra información al paciente.
parte, de manera que el otro no se sienta ame El tono de voz, aun sin darnos cuenta, está
nazado y que cada uno tenga la impresión de expresando la confianza en sí mismo. Las per
permanecer en contacto y presente para el sonas que tienen poca confianza en sí mismas
otro. Se ha comprobado que mirar de manera lo manifiestan mediante la importancia que le
excesiva y con insistencia a un paciente, sin dan al contenido afirmativo e incluso agresivo
causa alguna aparente, posee probablemente de lo que dicen. Por otra parte, cuanto más
efectos negativos, al hacer que tal paciente alto hablan las personas, más nerviosas se
se sienta a sí mismo como una persona rara, considera que están. Si hablan muy lento, más
mala o gravemente enferma, o bien como negativamente se las juzga (no obstante, hay
escudriñado en su intimidad. que tener en cuenta el contexto).
Hay una tendencia a mirar al interlocutor Por tanto, la voz tiene una especial
cuando el emisor no duda de lo que dice, y importancia en la impresión que nuestros
también al final de las frases. interlocutores se hacen de nosotros. De aquí
De la misma manera, cuando queremos que debamos esforzarnos por encontrar el
que alguien cese de hablarnos, basta a veces volumen adaptado y que demos énfasis a lo
con no mirarle y mirar a otra parte. que decimos. Tan negativo es el tono muy
Si tenemos dificultad para mirar a ciertas bajo como el tono muy alto.
personas, podemos entrenarnos mediante un
ejercicio de relajación y, cuando estamos re Fluidez verbal
lajados, visualizar a esas personas y compro La velocidad con la que hablamos también
bar que las miramos a los ojos; veremos que tiene su importancia. Si hablamos muy de
después nos resulta más fácil. prisa, nuestro interlocutor tendrá dificultad
Por otra parte, si le resulta difícil mirar a para seguirnos. Si hablamos lentamente o
los ojos de la otra persona, puede mirarla dudando, o no insistimos en las palabras
a la frente, al «tercer ojo», a la barbilla, a la importantes, perdemos el interés de nuestro
boca, a las mejillas, etc.; de esta manera po interlocutor. Es preferible repetir una cosa
drá mantener más fácilmente la mirada hacia dos o tres veces a decirlo muy deprisa o muy
su interlocutor y se sentirá menos nervioso o lentamente.
molesto al mirarle.
Tono
Elementos acústicos Empleemos diferentes tonos de voz para ex
presar los diversos sentimientos o emociones
La voz que tengamos.
Varios autores (Bugental, 1998) afirman La fuerza o el volumen de la voz son
que las personas seguras de sí mismas se características que es preciso saber variar.
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 41
También es conveniente que hagamos ejer Los silencios se pueden producir debido
cicios de articulación y que nos escuche a una serie de factores:
mos. 1. Emocionales (bloqueos, angustias, ame
El tono muestra la calidad de la voz. Hace nazas…).
que se diferencie un mensaje de otro (p. ej., 2. Intelectuales (p. ej., reflexiones, falta de
si lo digo en broma o en serio). ideas…).
Conviene emplear diversos tonos de voz 3. De interacción entre el profesional y el
para indicar sentimientos, emociones, cariño, paciente (p. ej., el paciente no confía en
debilidad, etc. el profesional y muestra, mediante el
Pausas y silencios silencio, su resistencia a comunicarse…).
Es importante tener en cuenta las pausas e ir Actitudes del profesional de la salud
intercalándolas con paráfrasis que indiquen ante los silencios
que se está escuchando.
El silencio lo tendremos que revalorizar Ciertos profesionales, sobre todo los princi
como una parte de la comunicación que uno piantes, encuentran que el silencio es difícil
tiene consigo mismo. de soportar y creen que si este se produce es
Hoy, a menudo, repetimos mensajes no a causa de ellos, por lo que creen que deben
personalizados; el silencio nos permite to evitarlo a toda costa.
marnos el tiempo de poderlos personalizar En la medida en que el profesional quiera
e interiorizar. implicarse en la situación expuesta por el
La comunicación científica a menudo paciente, debe entrar en el mundo del pa
tiene poco de personal, y esta personaliza ciente y preguntarse: ¿qué siente el paciente?,
ción podremos hacerla posible gracias al ¿dónde se encuentra? ¿dónde quiere llegar?,
silencio. ¿cómo se siente en este momento?, etc., y
El silencio tiene varios significados: con el fin de no equivocarse, clarificarlo con
él. En definitiva, si el profesional es empático
1. Silencio de poder, que impone al paciente con el paciente, sabrá respetar y detectar los
y hace que este se calle. silencios de forma adecuada, e insistimos, si
2. Rechazo de comunicación. no sabe lo que quiere decir el silencio, hágale
3. Escucha activa: indica interés, acepta un feedback al paciente y clarifíquelo. Por
ción, empatía y comprensión por lo que el ejemplo:
otro dice, que calla con las palabras pero
todo el cuerpo le está diciendo: sigue ha
blando, te escucho. […] Me acaba de decir que ayer estuvo
paseando con su amiga…
Lo debemos revalorizar como una apertura al De pronto se ha callado y no sé lo que
otro y a nosotros mismos, y en caso de duda, me quiere decir con ese silencio.
clarifiquémoslo, preguntándole al paciente
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42 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
debe explicar al paciente que los silencios y El paciente se calla; espero unos breves
las pausas forman parte de la relación y que, segundos y le digo: «Me estaba diciendo
por tanto, se deben respetar. En caso de duda, que ayer estuvo hablando con su esposa
sobre la enfermedad y se ha callado; no
es necesario clarificarlo con el fin de que no
sé lo que quiere decir con su silencio. Si
aparezca un cierto malestar o tensión entre quiere seguir hablando de eso, seguimos;
los interlocutores. si quiere reflexionar, reflexione, o si quiere
cambiar de tema, pues cambiamos».
Actitudes del paciente frente De esta manera no me sentiré molesto
a los silencios por su silencio y no tendré que pensar: ¿le
El silencio del paciente puede ser debido a: dejo más tiempo de silencio?, ¿le hago al
guna pregunta sobre lo que pasó?, ¿cambio
1. Su ansiedad o angustia, que producirá de tema?, etc.
bloqueos en la relación. Puede ser que,
preocupado por sus problemas, no es Otra forma de hacer frente al silencio
cuche al profesional. es aprovechar que el paciente haga una
2. Sentir falta de claridad y precisión en pausa para preguntarle cómo se siente
su pensamiento o lenguaje, al exponer su al decirme lo que me está comentando.
problema. Es decir, en la comunicación hablamos
3. Pensar que el tema ha concluido. mucho de contenidos y muy poco de sen
4. Una confrontación que resulta muy ame timientos. Preguntar al paciente cómo se
nazante para el paciente. siente nos permite profundizar en lo que
5. Necesitar más tiempo para aclarar su me está diciendo. En el capítulo siguiente
pensamiento o sus emociones. hablaremos sobre la importancia de los
6. Haber dicho alguna cosa que le ha per sentimientos.
turbado o bien que el profesional, por
equivocación, ha dicho algo que ha sido
malinterpretado por el paciente. Expresión facial y gestos
7. Resistencias. El paciente puede permane Nuestra expresión facial procede de actos
cer silencioso porque se está resistiendo reflejos congénitos: el recién nacido hace
a lo que él considera una intrusión. Este las muecas de los sabores ácidos, dulces y
puede ver en el profesional a una figura amargos. Ríe, sonríe, llora y bosteza con la
autoritaria o la proyección de algo que perfección de un adulto. También, nuestros
él no ha aceptado y quiere evitar a toda gestos y nuestra expresión verbal manifies
costa. tan nuestra actitud hacia el interlocutor. La
Cómo afrontar los silencios principal característica de las personas que
son percibidas como cálidas, agradables, es
El silencio es una comunicación no verbal. su sonrisa. Shrout (2006) muestra en una de
Por otra parte, sabemos que toda comuni sus investigaciones que la sonrisa en los hom
cación no verbal se presta a interpretación, bres es importante para producir una impre
y que toda interpretación es mala comuni sión favorable, probablemente porque tienen
cación si esta no se clarifica con el paciente tendencia a sonreír menos que las mujeres y
o el interlocutor. Por tanto, con el fin de no esto se convierte en un factor más importante
sentirnos molestos ni interpretar, lo más sen en ellos que en ellas.
cillo y lógico es clarificar el silencio. Con Aparte de la importancia de la sonrisa,
esto queremos indicar que hay que preguntar que es como un bálsamo de paz para el in
al interlocutor qué es lo que nos quiere decir terlocutor, conviene tener en cuenta que la
con su silencio. Pongamos un ejemplo: expresión facial esté en consonancia con lo
que sentimos, ya que de esta manera se nos
Imaginemos que el paciente nos está di comprenderá mejor. Si por alguna razón no
ciendo: «[…] Ayer estuve hablando con mi podemos tener esta consonancia, creemos
esposa sobre la enfermedad y…». que lo más sencillo es explicar a nuestro
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 43
interlocutor lo que nos pasa para que así no Práctica de la expresión facial
interprete de forma negativa. Para conocer nuestras capacidades y mejo
Por ejemplo: son las dos de la tarde, rar el nivel de expresión facial y los gestos,
nos sentimos cansados, nos damos cuenta podemos hacer algunos ejercicios como,
de que el cansancio nos domina, sin que a por ejemplo, imaginar un hecho aconteci
veces podamos controlarlo. Este se manifiesta do en los últimos días, un acontecimiento
con bostezos, distracciones, etc. Si acude un que hemos vivido de manera alegre, triste,
paciente del que forzosamente tenemos que agradable o con cólera, etc., y expresarlo de
ocuparnos, este se da cuenta de que bosteza forma no verbal ante otra persona; luego le
mos y nos distraemos. Ante nuestro compor pediremos si ha adivinado el sentimiento que
tamiento, ¿qué va a interpretar?; tal vez que hemos expresado y lo que piensa de nuestra
nos aburre su caso o que no merece nuestra expresión facial y/o gestual. De esta manera
atención, etc. Sin embargo, si le explicamos podemos expresar mejor nuestras emociones,
que estamos cansados, que si observa algún que serán bien interpretadas.
gesto, como un bostezo, que no lo tome a Este ejercicio lo podemos practicar noso
mal, pues es debido a nuestro cansancio, etc., tros solos filmándolo, mirándonos al espejo
esto permitirá que el paciente no lo interprete mientras hablamos por teléfono, etc. Obser
de forma errónea, y sobre todo en contra su vemos de esta manera nuestra expresión y
ya, pues también a él le suele pasar cuando veamos si está en consonancia con nuestras
está cansado. emociones o sentimientos, y observaremos
Otro ejemplo: en cierta ocasión un pro cómo nos sentimos.
fesional frunció la ceja cuando un paciente Hemos de señalar que, lógicamente, en
le hizo una sugerencia sobre un tratamiento una buena comunicación no se debe inter
y este interpretó el gesto como un rechazo, pretar, sino clarificar. Sin embargo, somos
cuando en realidad lo que le pasaba es que conscientes de que la mayoría de las personas
tenía dolor de cabeza. En otra ocasión, una van por la vida interpretando los diversos
sonrisa en un momento inoportuno fue inter gestos o actitudes no verbales, de ahí que
pretada como un ademán de falta de com sea importante tener algunas ideas de lo
prensión y se produjo una discusión. que suele interpretarse con ciertos lenguajes
No solo nuestro rostro manifiesta senti no verbales para que, de este modo, no nos
mientos. Todo nuestro cuerpo puede ayudar extrañemos ni molestemos por las conclu
o provocar rechazo en la comunicación. Así, siones que nuestros interlocutores hacen de
hay personas que mientras hablan mueven nuestros gestos.
tanto las manos y los brazos que pueden hasta
distraernos. Por otra parte, hay personas que
no se mueven, guardan sus brazos y manos Ocupación del espacio
de una manera rígida o están cruzados de
brazos continuamente, de manera que mues Distancia interpersonal
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tran un aire pasivo o defensivo. Estar atentos El sentido del yo del individuo no está limi
a los gestos ayuda, pues, a percibir mejor los tado por su piel; se desplaza dentro de una
mensajes o a poderlos expresar de forma más especie de burbuja privada que representa
adecuada. Por ejemplo: la cantidad de espacio que siente que debe
haber entre él y los otros.
Sabemos que la distancia regula el con
«Veo que estás con los brazos cruzados, tacto y el respeto del territorio.
¿quieres decir algo con esa postura?» Este lo regulamos con el movimiento del
cuerpo, con la mirada, acercándonos dema
La respuesta de nuestro interlocutor pue siado o demasiado poco. Si nos acercamos
de ser: «Es porque así estoy más cómodo»; demasiado, la persona puede sentirse como
por tanto, no hay que sacar la conclusión de amenazada, como violada en su espacio ín
que el paciente se está protegiendo de mí. timo; pero si hay que hacerlo, que sea con
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44 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
«Aunque hemos señalado que lo más senci El presentador ante el grupo o el profesor
llo es clarificar, no obstante somos cons en el aula dan señales, por la posición que
cientes de que esto puede resultar difícil ocupan, por la orientación que adoptan los
para ciertas personas; de aquí que propon demás, de que están en su territorio o han
gamos lo siguiente: venido a presidirlo.
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 45
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46 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 47
6. Los hombros estarán inclinados o volca No estarán quietas, aunque podrían es
dos hacia delante en ademán de acoger a tarlo en algunos momentos. Las palabras,
nuestro interlocutor o paciente. el sentido de lo que decimos, las moverán
7. ¿Qué hacer con las manos? Manos sin que lo advirtamos, sin que tengamos que
abiertas, desde la cintura hacia arriba o pensar en el gesto. Los meridionales move
adelante. mos las manos algo más que los nórdicos.
Corresponde a una cultura al aire libre, en
Gestos de descarga la que nos comunicamos a mayor distancia.
Sin complejos.
Los animales, el hombre incluido, realizan
Cruzar las manos ante la región pélvica
unas cortas acciones, tics o gestos consabi
es postura inocente, timorata, que no debe
dos, que les sirven de válvula de escape o
prolongarse. Llevar la misma posición a
descanso de la tensión comunicativa. Se inte
la espalda nos mutila: si una mano aprieta
rrumpe la actividad principal para introducir
fuertemente la muñeca de la otra, delante o
actos estereotipados, bien conocidos, de aseo,
a la espalda, nos revestimos de la autoridad
arreglo personal, ingestión de alimentos y
del sargento.
otras habilidades motoras.
Las manos en los bolsillos ocultan algo
Nos arreglamos el pañuelo o la corbata,
más que las manos. Si dejamos el pulgar fue
los puños de la camisa, etc. Nos restregamos y
ra o solo ocultamos este dedo en el chaleco
limpiamos los ojos, las gafas; llevamos las ma
o bajo el cinturón, la actitud se vuelve clara:
nos a la nariz y los oídos; satisfacemos ciertos
«todo está bajo control». En el pulgar y en
picores; enjugamos el sudor, repasamos el aseo
las yemas de los dedos reside la precisión
de nuestras uñas. Acudimos una y otra vez al
del homofaber, en el círculo y la esfera que
vaso de agua. Arreglamos por enésima vez
forman los dedos en arco, la clarividencia del
unos papeles, limpiamos una mota de polvo,
sapievis, seguro de sí.
abrimos y cerramos un cajón, nos enfrascamos
Mostrar las palmas de las manos es signi
en un dibujo, trazamos flechas, etc.
ficar que digo la verdad, que no oculto nada,
Deben censurarse y omitirse las activida
como en un juicio ante el oyente. La palma,
des que puedan molestar a los presentes, por
blanca también en el hombre negro, tiene
repetidas o de mal gusto. Sin embargo, no
algo de entrañable. La sobriedad del varón
debe suprimirse toda demostración de duda
teme caer en el amaneramiento (blandura
o debilidad. Una actitud excesivamente atil
femenina) si muestra mucho las palmas. Pe
dada nos restaría humanidad.
ro la credibilidad está en las manos, tarjeta
blanca de bienvenida y amistad. Para pedir
Qué hacer con las manos y para dar (o para comunicarse) se enseñan
Basta que estén presentes, habría que res las palmas.
ponder. Es una preocupación injustificada. Blandir el hacha, esgrimir argumentos,
Porque en realidad no hacen nada propio: golpear la tierra, acuchillar enemigos en el
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solo acompañan como testigos. El oficio de aire, mover todo el brazo, pertenece a una
las manos es trabajar, defenderse o atacar. oratoria de otros contextos. Como dirigir el
Y cuando nos comunicamos no tienen que tráfico y señalar la puerta, actos supremos de
hacer nada de esto. Quizá, demostrar que es dominio que se realizan sin necesidad de que
tán en lo que se dice, sin asumir protagonismo. medien las palabras.
Cuando esperamos una orden, las colo Manejar, manipular, management: en la
camos sobre la parte anterior de las caderas, empresa, el poder está en las palabras a media
listas para ocuparse en algo. Cuando empe voz y en cierto juego de las manos. Disecar
zamos a hablar, pueden estar delante de noso un tejido vivo, unir ideas, pasar de una a otra
tros, los codos flexionados. Juntas, apoyadas estrategia, cercar la oportunidad, acotar el
en la cintura (no en jarras) o simplemente antes y el después, lo de arriba y lo de abajo;
abiertas, sin rigidez, en escorzo que muestre abrir caminos, dentro y fuera, ganar dinero:
algo las palmas. para manejar estos conceptos, los propios de
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48 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
una presentación, nos basta con colocar las A veces nos resulta difícil saber si le agrada
manos delante del pecho y accionar con o no que le toquemos. Si al hacer este acto
las yemas de los dedos. de forma espontánea observamos que el
paciente se pone rígido, o rechaza nuestro
El tacto gesto, es un signo de que no debemos insis
tir. En nuestra experiencia constatamos que
Hay varias clases de tacto. Así, este pue nos ayuda a salir de dudas preguntarle si le
de ser: molesta o no que le toquemos, pues con su
1. Funcional o profesional. lenguaje verbal y no verbal nos va a decir si
2. Cortés, social (p. ej., los saludos). le agrada o no.
3. Amigable entre las personas con un cierto Otro aspecto es que, a menudo, nos senti
vínculo afectivo, en el que, cuanto mayor mos obligados a tocar a los pacientes, incluso
es el vínculo afectivo, más tacto hay. en sus partes más íntimas; esto exige deli
4. Tacto íntimo, sexual, amor. Es el tacto de cadeza y mucho respeto, lo cual quiere de
la pareja o de los padres-hijos, etc. cir que hay que pedirle permiso y explicarle
por qué lo hacemos, con el fin de que no se sien
Conviene tener en cuenta que este también ta violado en su intimidad o molesto.
está en función de la edad y las culturas.
Así, son más tocados los niños y menos los Apretón de manos y contacto íntimo
ancianos. En los países más nórdicos suelen Dar un apretón de manos, según las circuns
tocar menos que en los países mediterráneos. tancias, constituye una expresión que indica
El contacto indica proximidad cuando afirmación y, de alguna manera, que se está
este es recíproco. de acuerdo o se comparten los sentimientos de
Por el contrario, cuando se da en una sola la otra persona.
dirección indica poder; así, tocamos a los Las personas tímidas o que se sienten
niños, pero a algunas personas adultas no les molestas tienden la mano de forma poco enér
gusta que las toquen mucho. gica.
¿Cómo tocamos a nuestros pacientes? El El hecho de tocar la mano de otro pue
contacto físico es la principal de las conduc de hacer que este se sienta ansioso o puede
tas no verbales en el ejercicio de la enfer producirle un cierto miedo; esto estará en
mería y la medicina. Sin embargo, hay que relación con la personalidad de cada uno. Hay
tener en cuenta que el tocar, como ocurre con personas que tienen dificultad para tocar y
otras formas de conducta no verbal, puede para ser tocadas.
resultar congruente o no con los mensajes Por otra parte, según la relación que nos
verbales, de forma que, por ejemplo, el hecho inspira la otra persona tendemos, al mismo
de que una enfermera toque a un paciente a la tiempo que le damos la mano, a ponerle la
vez que le asegura que no debe preocuparse otra sobre el hombro o la espalda.
por la operación quirúrgica que se le va a Ser afirmativos en dar la mano a alguien
realizar, puede, o bien corroborar el mensaje no significa apretarle tanto que le hagamos
tranquilizador, o bien transmitir un estado de daño. Hay un término medio.
nerviosismo que contradiga el mensaje ver
bal, haciendo que este sea ineficaz e incluso El olfato
contraproducente. Hay un cierto tocamiento
terapéutico que puede producir un cierto bie Aunque la comunicación a través de los olo
nestar; se trata del masaje terapéutico que a res es muy importante en el mundo animal,
veces practicamos cuando los pacientes están en los hombres parece ser relativamente poco
tensos o angustiados. fundamental. Sin embargo, el campo de la
Asimismo, cuando el paciente nos está salud puede ser una destacada excepción.
hablando de alguna situación muy personal Algunas enfermedades y tratamientos pue
y manifiesta tristeza o le brotan las lágrimas, den actuar directamente para producir en el
tendemos a acercarnos más e incluso tocarlo. paciente olores desagradables, mientras que
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 49
otros afectan al olor del paciente a través de esto lo mejor posible, al menos en lo que
acciones sobre la región gastrointestinal. Por a mí respecta?
otro lado, también los profesionales de la sa »Paciente: No sé, tal vez si hay algún
desodorante, o ponerse una máscara. No
lud pueden ser asociados a olores particulares.
sé, creo que usted tiene más experiencia y
El uso de desinfectantes, tratamientos quími me podría ayudar en este tema.
cos, anestesia, alcohol, etc., así como olores »Profesional: Sí, sin duda que podemos
cogidos de otros enfermos, pueden todos ellos buscar soluciones, pero me gustaría saber
transmitir mensajes olfativos al paciente. Y no cómo se siente porque le haya dicho esto.
cabe duda de que muchos de estos olores, tan Pues de verdad que no quisiera herirle en
to de los pacientes como de los profesiona sus sentimientos, sino que usted se encuen
les de la salud, suscitan en nosotros fuertes sen tre mejor.
timientos negativos. La persona enferma que »Paciente: No se preocupe, le agradezco
experimenta malos olores puede ser rela que haya venido a hablar de este tema, pues
no sabía cómo abordarlo ni qué hacer. Así
cionada con sentimientos negativos, o bien
pienso que entre ambos buscaremos alguna
a veces no relacionarse, incluso cuando lo solución […].»
necesita, por tener la impresión de que debido
a su olor nadie querrá escucharla. No vamos a
De esta forma, con mucha empatía, cree
negar que ciertos olores nos impiden concen
mos que ayudaremos al paciente a hacer
trarnos en una buena escucha.
frente a su situación, sin que por eso se sienta
¿Cómo solucionar esto? En el capítulo 5
humillado. Pues sabemos que no abordar este
hablamos de diversas formas de comunicar,
tema, tan delicado, es una fuente de sufri
entre ellas, de cómo hacerlo cuando yo pro
miento para el paciente, pues a veces se busca
fesional y tú paciente tenemos un problema.
cualquier excusa para no ir a verlo debido a
En este caso, el profesional se siente molesto
su mal olor.
por el mal olor; también el paciente, porque
Los olores tienen a menudo un enorme
sabe que su mal olor puede provocar rechazo.
poder para evocar la memoria de tiempos y
Abordar esto mutuamente con mensajes Yo
lugares ya olvidados. En consecuencia, los
y escucha activa empática permitirá salir de
centros sanitarios (hospitales, consultorios,
esta situación (v. cap. 5).
ambulatorios, etc.) pueden evocar ciertas
Pongamos un ejemplo: se trata de un pa
experiencias negativas vividas traumáti
ciente, como hemos dicho, que experimenta
camente durante la infancia o vividas por
una enfermedad que produce mal olor. El
otros familiares, y así crear importantes
profesional puede entrar en comunicación
expectativas negativas. No está de más pre
de esta forma:
guntar al paciente si le molestan los olores
o le evocan sentimientos negativos, ya que
«Profesional: Mire, Juan, vengo a hablar con esto permite clarificar ciertas reacciones o
usted de un tema del que me cuesta mucho comportamientos que a veces nos pueden
hablarle, por si usted se siente incómodo, y extrañar.
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50 SECCIÓN | I Algunos aspectos de la comunicación
Hay personas muy esclavas de la moda; verbales de engaño; sin embargo, con nuestra
generalmente son consideradas como perso comunicación no verbal le estamos gritando
nas inseguras y tratan de afirmarse mediante al paciente que su situación es desesperada.
la apariencia. Todo esto lleva a que los pacientes sientan
Por otra parte, no debemos olvidar que la una angustia mayor, dado que no creen nece
apariencia física es nuestra tarjeta de visita y sario comunicarse si unos y otros no le dicen
que va a influir o a contaminar, ya sea de ma la verdad.
nera positiva o negativa, la relación ulterior. Finalmente, habría que volver a recordar
Debemos tener presente en nuestro traba la importancia de la congruencia o incon
jo cómo vamos vestidos, y esto tanto respecto gruencia entre el mensaje verbal y el no ver
a las batas que llevamos, su transparencia, su bal por parte del profesional de la salud; en
limpieza, su presentación, etc., como también este punto hay un problema particularmente
a la ropa que vestimos cuando vamos a traba difícil de resolver y que está en relación con
jar, pues no parece lógico ir vestido de fiesta los distintos efectos a que dan lugar diversas
cuando se va a trabajar, ya que se están tras combinaciones de efectos verbales y no ver
tocando los papeles; lo mismo que nadie va bales: así, un mensaje positivo acompañado
con vestido de trabajo a una fiesta. El usuario de una señal no verbal negativa se traduce
puede percibir esto como que lo único que en una impresión de falta de sinceridad. Si
importa en el profesional es su apariencia el mensaje positivo se acompaña de una
(uñas, joyas, maquillaje…), incluso puede cara triste puede producir la impresión de
sentirse molesto si es tocado por unas uñas indiferencia. Sin embargo, esta expresión
largas o unos dedos llenos de joyas. no verbal, unida a un mensaje relativamente
Anime a sus colegas a que le hagan negativo y sumiso, produce la sensación de
observaciones sobre su apariencia física. sinceridad.
Observe, por ejemplo, cuál de sus vestidos Creemos que sería mucho más fácil,
le permite sentirse con más confianza en sí como expondremos más adelante en el capí
mismo y póngaselo principalmente cuando tulo 5 preguntarle al paciente cómo se siente
quiera afirmarse. Indudablemente que esto y qué espera de nosotros los profesionales o
es muy personal en cada uno y, según las los familiares para sentirse mejor. Si lo que
situaciones, usted debe, con la ayuda de sus me pide puedo dárselo, se lo doy, y si no, le
colegas o amigos —o enemigos— descubrir remitiré a alguien que pueda ayudarle en su
lo que le ayude a expresar lo que es o quiere demanda. Abordar estas situaciones con el
ser. Al menos en este nivel puede llegar a sen paciente lo más pronto posible nos evitará
tirse libre y no condicionado por las modas o la ansiedad de estar siempre fingiendo o
el qué dirán. Asimismo, también le permitirá pensando que les engañamos, cuando en el
adoptar una apariencia física de respeto de fondo no es así, pues el paciente nos observa
sí mismo y de los demás durante su trabajo mucho y se da cuenta de que nuestro lenguaje
profesional. verbal y no verbal no se corresponde, no hay
congruencia o autenticidad. Pidámosle ayuda
Señales no verbales de ocultar a él, ya que nos dirá lo que más le conviene.
la verdad
CONCLUSIÓN
Este tema posee un gran interés en el campo
de la salud. Observamos en algunos pacientes A menudo tendemos a valorar más la comu
los intentos de ocultar la verdad, debido a la nicación verbal que la no verbal. Sin embar
enfermedad o a otras razones, como el no go, numerosas investigaciones han mostrado
querer angustiar a sus seres queridos. que la comunicación no verbal es más rica y
También los profesionales, debido a las vehicula mensajes incluso más importantes
consignas de los familiares o a que ellos mis y sutiles que la comunicación verbal. Ahora
mos no saben cómo abordar la situación lími bien, esta es ambigua y necesita ser analizada
te del paciente, optan por comportamientos e interpretada.
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Capítulo | 3 La comunicación no verbal 51
Teniendo en cuenta algunos de los as Davis F. La comunicación no verbal. Madrid: Alianza
pectos más elementales aquí señalados, lle Editorial; 1998.
Ekman P. ¿Qué dice este gesto? Madrid: RBA Libros;
garemos a mejorar y sentir una comunicación 2004.
más profunda, sincera y cálida con nuestro Fast J. Hablando entre líneas. Barcelona: Kairós; 1980.
interlocutor. Fast J. El lenguaje del cuerpo. Barcelona: Kairós; 1981.
En suma, pues, por una serie de razones, Hall ET. Le langage silencieux. París: Ed. Seuil; 1984.
Pease A. El lenguaje del cuerpo. Barcelona: Paidós
la comunicación no verbal tiene una gran Ibérica; 1997.
importancia en las situaciones de la salud. Poyatos F. La comunicación no verbal. Tres Cantos:
Aunque esta importancia está siendo cada Istmo; 1994.
vez más reconocida, el tópico generalmente Rebel G. El lenguaje del cuerpo. Madrid: Edaf; 2000.
no es tratado con el rigor científico aplicado a Saavedra Miján J. Comunicación no verbal en medicina
de familia. Madrid: Drug Farma; 2002.
la mayoría de los demás temas de la relación
con los pacientes y familiares. Por fortuna,
ya no es necesario que los profesionales de la BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA
salud meramente se fíen de conceptos vagos
como la intuición, la sinceridad o la empatía Boisvert JM. S’affirmer et communiquer. Quebec: Les
edit De l’Homme; 1988.
a la hora de tratar con los sutiles aspectos Boschi Fontcuberta J. Comunicación no verbal del sín
interpersonales de los cuidados sanitarios. drome depresivo en el anciano. Barcelona: Servicio
La atención a las señales no verbales merece de Información y Publicaciones. Universidad de
un lugar central en el diagnóstico y el con Barcelona; 1994.
Bugental DB. Communication in abusive relationships:
sejo, al lado de las más modernas técnicas cognitive constructions of interpersonal power. Am
de computación y tecnológicas. Por consi Behavior Sci. 1993;36:288-308.
guiente, el profesional de la salud debería Castañer Balcells M. La comunicación no verbal del
ser capaz de leer las señales emocionales educador físico: construcción de un sistema catego
del paciente en las expresiones faciales, los rial de observación y de análisis del comportamiento
cinésico. Barcelona: Servicio de Información y Pu
movimientos corporales, el tono de la voz, la blicaciones. Universidad de Barcelona; 1995.
mirada, etc., y debería igualmente aprender Cayrol A, Barrere P. La programmation neuro-linguis
a usar estos mismos canales de comunica tique. París: Ed. ESF; 1988.
ción no verbal para comunicarse con sus Cooper K. Comunicación no verbal para ejecutivos.
Madrid: Emalsa; 1985.
pacientes. No obstante, con el fin de que sus Durand J. Les formes de la communication. París: Ed.
interpretaciones no sean erróneas, conviene Dunod; 1981.
verificar con el paciente lo que él interpreta Hostie R. Session de sensibilisation aux relations hu
sobre las comunicaciones no verbales del maines. París: Ed. Epi; 1974.
profesional. Corraze J. Les communications non-verbales. París:
Puf; 1980.
Kaeppelin PH. L’écoute. París: Ed. ESF; 1987.
BIBLIOGRAFÍA ESPECÍFICA Madrid J. Hombre en crisis y relación de ayuda. Madrid:
Asetes; 1986.
Cestero Mancera AM. Estudios de comunicación no Shrout PE, Herman C, Bolger N. The costs and benefits
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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Capítulo 4
Consideraciones generales
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
La incomunicación
e lo contrario, se producirá en el pa-
D
Muchos de nuestros pacientes se sienten in- ciente:
comunicados, ya que las palabras que noso- a. Insatisfacción, ya que él no se siente
tros usamos no son las que corresponden a su comprendido. Aún más, ve que no
comprensión o vocabulario; aún más, en mu- tiene la posibilidad de poder pedir
chísimas ocasiones no dejamos que expresen explicaciones, pues los profesio-
con sus palabras lo que ellos viven respecto nales se las van a dar de la misma
a sus sentimientos en el ámbito personal, manera, es decir, con un lenguaje no
familiar o social. Esto da como resultado: adecuado al suyo. Esto va a hacer
© 2014. Elsevier España, S.L. Reservados todos los derechos 55
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56 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
que su insatisfacción, sus dudas y sus esté por parte del que emite y de quien la
miedos aumenten, ya que no sabe si recibe; de aquí que a la hora de comunicar-
lo que hace es lo mejor que debería nos tengamos bien presente qué es lo que
hacer, lo cual se puede traducir en: queremos comunicar y cómo lo vamos a
– Falta de conformidad con el trata transmitir para obtener el resultado desea-
miento. Como acabamos de señalar, do. Señalamos, entre otros, los objetivos
esta inconformidad no es debida a siguientes:
mala voluntad o falta de coopera-
ción, sino que lo que falla muchas 1. Informar, teniendo en cuenta emplear
veces es la comprensión de lo que las palabras adecuadas a la comprensión
le decimos y nuestra persuasión del paciente.
y convencimiento mediante las 2. Influir emocionalmente. Debemos
palabras que empleamos de que el comunicar al paciente confianza, sereni-
tratamiento que le proponemos es dad, bienestar, etc., ya que, debido a su
lo que nos aplicaríamos a nosotros enfermedad y a la ansiedad que esta le
o a nuestros seres queridos, a fin de produce, sus defensas disminuyen, con
que el paciente sienta la necesidad el consiguiente riesgo de que empeore
de llevar a cabo en su provecho lo su estado.
que el profesional de la salud le ha 3. Influir racionalmente. Anteriormente
indicado. Finalmente todo esto da hemos señalado que muchos de nuestros
como resultado: problemas están originados por nuestras
○ Una baja calidad de los resulta ideas irracionales, es decir, por lo que
dos que se habían propuesto los pensamos o imaginamos respecto a una
profesionales. Indudablemente, situación, en este caso la enfermedad.
el paciente no puede colaborar Aquí pretendemos que con nuestras ra-
en algo en lo que no se siente zones o explicaciones el paciente com-
agente ni responsable. Por otra prenda y, comprendiendo, colabore y
parte, con lo que acabamos de deje de estar angustiado.
señalar estamos favoreciendo el 4. Ayudar al paciente a que colabore en
rol de «paciente», es decir, de una acción concreta y no por la fuerza,
dependencia de nosotros, de no como a veces sucede. En la medida en
responsabilizarse de que es él el que expliquemos al paciente lo que pre-
principal artífice de su mejora. tendemos y este capte y comprenda que
lo que le proponemos es lo mejor para
él, veremos que hay una mayor colabo-
ALGUNOS OBJETIVOS ración por su parte, la cual le permitirá
QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA sentirse mejor. Por consiguiente, el
EN LA COMUNICACIÓN profesional podrá confiar más en el pa-
ciente, lo que aumentará su autoestima,
Quien emite un mensaje, es decir, quien e incluso podrá conseguir economizar
comunica algo, siempre tiene una finalidad. tiempo y dinero.
Esta finalidad está clara para el emisor, pero 5. Persuadir al paciente sobre el tratamien-
no para el receptor. Por ejemplo, si el pa- to o la colaboración en este, etc. Sabemos
ciente dice: «Estoy cansado», el paciente que cuanto más cálida y asertiva sea la
tiene claro lo que con esto quiere expre- relación por nuestra parte, menos angus-
sarle al profesional, pero el profesional no tiado se sentirá el paciente y más cola-
sabe exactamente qué es lo que espera el borará, pues suponemos que su principal
paciente de él. Por tanto, para no interpre- deseo es la recuperación.
tar, es necesario saber cuál es la finalidad 6. Clarificar si vamos a tener una «en-
del paciente al decir que está cansado. Esta trevista» o a «entretener» al paciente.
se conseguirá tanto más cuanto más clara El paciente debe tener claro si, cuando
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Capítulo | 4 Consideraciones generales 57
estamos con él, lo hacemos por pasar a que preste más atención en uno u otro
el tiempo o si nuestro encuentro tiene caso.
otra finalidad, como informar, orientar,
ayudarle a enfrentarse y a solucionar De todo esto vamos a intentar hablar en esta
sus problemas, etc. Esto le ayudará sección.
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Capítulo 5
Esquema de la comunicación
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
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60 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
FIGURA 5-1 Proceso de manifestar una necesidad CÓMO DEBE EMITIR EL MENSAJE
interna. EL EMISOR
Pongamos un ejemplo. Imaginemos que nos
llega una paciente, a la que llamaremos Judit,
y nos dice: «Luis, este mundo es un absurdo,
nada merece la pena» (fig. 5-5).
Ante un mensaje como este, en sí nada
claro, ¿qué puede pensar el receptor? A me
FIGURA 5-2 Proceso de puesta en clave. nudo lo que solemos hacer es interpretar, y
así podríamos hacer las interpretaciones de
como una crítica que como una invitación a la figura 5-6.
conectar con los sentimientos. El emisor es el comunicante, la persona
Vamos a ver ahora cada una de estas que desea transmitir un mensaje a un inter-
partes del proceso de la comunicación. locutor.
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 61
El emisor, al emitir su mensaje, debe te- no emita lo que quiere difundir sino a
ner en cuenta ciertos aspectos que son muy veces manifieste el mensaje con inter-
importantes si realmente quiere ser compren- pretaciones, proyecciones…) o semántica
dido por el receptor, sin ser interpretado, sin (p. ej., usando palabras que el receptor no
ambigüedad y tergiversaciones: conoce, o dándole un significado distinto
del que puede entender el receptor…).
1. Canal. Es la vía comunicativa que escoge el
emisor para realizar la codificación. Los dos Podemos decir:
canales principales son: el acústico (pala-
bras, sonidos, ruidos, suspiros…) y el visual Y esto se da porque se expresa, o bien solo
(escritura, gráficos, expresión corporal, se- el contenido del mensaje, es decir, lo que
ñales…). Pueden utilizarse varios canales ha ocurrido, o bien solo el sentimiento de lo
simultáneamente; si son auténticos, no debe que le está pasando pero sin describir lo que
haber incongruencias entre los dos y en este le ha pasado, o bien solicita una demanda
caso aumentan su poder significativo. sobre algo, sin expresar claramente qué
2. Código o clave. Es la formulación con- es lo que espera del profesional o emisor.
creta resultante del proceso de codifica-
ción, que consta de un conjunto de signos
accesibles al receptor. El problema del
código o clave es que el receptor (pro- Todo emisor que emita un mensaje verbal
fesional) interprete lo que quiere decir que se preste a interpretación (pues todo
mensaje no verbal se presta a ella) está rea
el emisor (paciente), y si no lo verifica
lizando una mala comunicación.
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62 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
en realidad el receptor no sabe por qué lo dice Vamos a ver cada uno de estos apartados
e interpreta lo que cree sobre este mensaje. con un ejemplo. Seguimos con el ejemplo de
O bien expresa solo sentimiento. Por Judit y, para no interpretar, le ayudamos a
ejemplo: que nos clarifique el contenido, el sentimien-
to y la demanda (fig. 5-7).
Por tanto, un buen emisor debe:
«¡Uf! ¡Qué cansado estoy!»
Contenido
También esto se presta a interpretación,
pues no sé lo que espera de mí como receptor Expresar claramente el contenido
al decirme que se siente cansado. (o situación que está viviendo
Lógicamente, esto quedaría claro si mani- o ha acontecido)
festase su demanda, es decir, lo que espera de mí El emisor debe ser claro, concreto y especí-
al decirme que ha trabajado mucho (contenido), fico en el contenido que quiere expresar. Por
que se siente cansado (sentimiento) y qué ejemplo, en el caso de Judit, el contenido
me pide (demanda), que es, precisamente, que nos permite comprender un poco más
que le deje unos momentos para descansar. lo que le está pasando podía ser el siguiente:
Por tanto, un buen emisor debe expresar:
1. Claramente un contenido, es decir, lo que «Luis, no tengo amigos.»
le ha pasado o está pasando.
2. Claramente un sentimiento: lo que siente Lógicamente, esto me permite com-
ante lo que le ha pasado o vivido. prender un poco más el mensaje de Judit,
3. Claramente una demanda o petición de lo pero aun así este mensaje se presta a ciertas
que desea o espera del receptor al decirle interpretaciones, con lo cual sigue siendo
el contenido y el sentimiento. una mala comunicación, pues no sé qué es
4. Debe tener en cuenta la forma de decirlo, lo que me quiere indicar al decirme que no
es decir, la relación. tiene amigos. En términos de comunicación
Recordemos que estos cuatro puntos son decimos que el emisor debe:
sumamente importantes para que la co- 1. Codificar. Es el proceso mental del emi-
municación sea clara por parte del emisor sor a través del cual traduce el mensaje a
y así el receptor no tenga que interpretar o unos signos capaces de ser reconocidos
adivinar. Por otra parte, nos facilitará mu- por el receptor.
cho la comunicación en situaciones difíciles
pues el emisor (paciente) nos dirá lo que es- Sentimiento
pera del profesional, y el profesional, siendo
auténtico, si está en su mano se lo concederá, Expresar claramente el sentimiento
y si no le dirá que lo siente mucho pero que No basta con expresar el contenido, pues
no puede acceder a lo que le pide, etc. no solo comunicamos contenidos, es decir,
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 63
hechos, acontecimientos, ideas o pensamien- pero debemos hacerlo de tal forma que el
tos, sino que es necesario comunicar también paciente no se sienta culpable de nuestras
el sentimiento, lo que se siente respecto a lo reacciones y, por supuesto, no debemos caer
que se está diciendo. en la tentación de darle consejos o quitar
importancia a lo que siente, o de juzgarle
El sentimiento manifiesta al receptor la por tener tales sentimientos..., pues esto po-
importancia, el peso y la gravedad del pro dría darle la sensación de ridículo por sentir
blema o lo que le está comunicando. lo que siente y, sobre todo, de no sentirse
comprendido, lo cual le llevaría a deplorar el
Si seguimos con el ejemplo de Judit, el haber mostrado sus sentimientos ante noso-
sentimiento nos permite comprender cómo tros. En muchos casos basta con reconocer
vive Judit el no tener amigos, y así, nos dice: lo que el otro nos dice y mostrárselo (con
un feedback y una empatía como después
«Me siento triste.» veremos) diciéndole, por ejemplo: «Me dices
que te sientes deprimido…».
Pues si no manifiesta el sentimiento y nos Por otra parte, dado que le cuesta expre-
quedamos solo con el contenido, podemos sar sus sentimientos, es necesario mostrarle
pensar o interpretar: «Qué suerte tiene Judit que los aceptamos sin juzgarle, culpabili-
al no tener amigos que le molesten o con los zarle, etc.
que continuamente tiene que contar». Al in- Otra situación se produce cuando el
terpretarla así no estaríamos comprendiendo paciente (interlocutor) solo nos manifiesta
por qué realmente nos dice esto Judit. (verbalmente) el contenido (lo que le ha pa-
sado) y no lo que siente ante esto, pero en su
entonación deducimos un cierto sentimiento.
Por tanto, el sentimiento es lo que hace que
Por ejemplo, si el paciente nos parece que
un contenido tenga uno u otro significado
para la persona. está triste o deprimido, le podemos decir:
Recordemos que los contenidos son neu- «Yo no sé por qué, pero me da la sensación
tros: una misma realidad varía según cómo de que hoy estás triste.»
la sienta el emisor.
Dado que, desde nuestro punto de vista, Esta manera de reflejárselo permite ve-
los sentimientos son la piedra angular de la rificar si hemos captado bien su estado de
comunicación, creemos importante señalar ánimo y, en caso contrario, damos la opción
algunos puntos a este respecto: de que el paciente lo rectifique y clarifique.
Las frases como:
1. Respetar el sentimiento del otro. A me-
nudo, cuando alguien nos dice que es-
tá muy triste por algo, solemos restarle «Me parece…», «tengo la impresión…»,
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64 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 65
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66 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
acaba de transmitir. Así, el emisor (paciente) situaciones embarazosas en las que no sabe-
puede sentir que no se le ha comprendido y, mos qué decir. En adelante, las situaciones
por tanto, sentirse herido, cuando el problema difíciles no se darán, pues es el emisor el que
está en que no ha dicho exactamente qué es me dirá lo que espera de mí, y yo le diré si
lo que pide o desea del receptor (profesional) puedo o no satisfacer su demanda, pero no
al comunicarle su mensaje. me quedará la duda de decirle: ¿qué le digo
Volvamos al ejemplo de Judit. Esta nos o qué espera de mí al decirme eso?
ha dicho el contenido: El problema que presenta el emisor es
que con mucha frecuencia ni siquiera sabe
muy bien lo que quiere. Habla y habla sin
«No tengo amigos.» prestar demasiada atención al curso del
diálogo y, sobre todo, sin expresar de forma
Nos ha dicho el sentimiento: concreta lo que necesita, y claro, ante esto,
si el receptor o profesional no recurre al
«Me siento triste.» feedback diciéndole lo que ha captado y le
ayuda a que sea concreto en su demanda,
Si nos quedáramos aquí, sería una mala pues se da el problema de la interpretación
comunicación, pues cabría la interpretación o adivinar, y como no adivine o interprete
por parte del receptor. Por ejemplo, el recep- bien, tiende el emisor (paciente) a decirle al
tor puede interpretar: «Quiere que la consue- receptor (profesional) que no le comprende.
le»; o bien pensar que es una exagerada, etc. Siempre que el paciente o emisor se di-
Sin embargo, si Judit completa su mensaje rija al profesional o receptor sin saber o sin
diciéndonos: expresarle con claridad lo que queremos de
él, lo más probable es que se produzcan dis-
cusiones que no conducen a nada.
«Te pido que me escuches.» Es muy frecuente que las entrevistas o
conversaciones se prolonguen indefinida-
ya no hay nada que interpretar, sino sim- mente sin satisfacer sus necesidades por el
plemente responder a su demanda. Ahora simple hecho de que el emisor no ha plan-
bien, al responder a su demanda caben varias teado de manera concreta lo que espera del
propuestas: otro, o incluso a veces no sabe muy bien lo
que quiere.
1. Que yo pueda escucharla y la escucho.
Resumiendo:
2. Que no pueda escucharla —por las razo-
nes que sean— y le diga que no puedo,
pero que buscaré a otra persona que la 1. El profesional debe ayudar al paciente
escuche. a evitar las frases vagas, abstractas o
3. Que no puedo y no sé quién puede es- ambiguas, y a que emplee un lenguaje
cucharla. de acción positiva para que le haga saber
4. Que ahora no puedo escucharla, pero sí qué quiere de él.
más tarde. 2. El paciente, cuanto más claramente
manifieste qué espera exactamente del
En cualquiera de estos casos, sí que quedará profesional, más probable será que lo
claro por parte del emisor lo que pide y por consiga. Como a veces el paciente cree
parte del receptor si puede o no satisfacer explicarse bien y no siempre es así, con
su demanda. En todo caso, ya no habrá la el fin de no interpretarle y que se equi-
duda de qué le digo (en tanto que recep- voque, un feedback por parte del pro-
tor) o cómo se lo digo, o de salirme por la fesional permitirá al paciente clarificar
tangente, pues está claro lo que el emisor y concretar su demanda o petición. De
espera de mí. esta manera estará clara la petición del
Creemos que si tenemos bien claro todo paciente y la respuesta que espera recibir
esto que acabamos de señalar evitaremos esas del profesional.
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 67
Relación 1. No valgo.
2. Soy tonto.
Al comunicar con el paciente o con nues- 3. Me creo superior al interlocutor y, por
tro interlocutor debemos tener en cuenta tanto, no va a comprender lo que le diga.
no solo lo que decimos, sino también cómo 4. No merece la pena lo que voy a decir…,
lo decimos. Con cierta frecuencia nuestro tengo miedo o temo que los otros se rían
interlocutor nos comenta: «Lo que me estás de mí, o de no hacerlo bien. Me creo tan
diciendo lo acepto porque llevas “más razón perfecto que si lo que digo no está muy
que un santo”, pero lo que me molesta mu- bien, no hablo.
chísimo es la manera de decírmelo». Es decir, 5. Me creo inseguro o tímido —bueno, me
en todo momento, cuando decimos algo a comporto como tal— y así yo no hablo
alguien, debemos tomar conciencia de cómo y los demás no lo notan. Forma sutil y
se lo estamos diciendo. ¿Me gustaría a mí que orgullosa de aprovecharme de lo que
me hablaran con el tono con el que me están dicen los demás sin yo mojarme.
diciendo las cosas?
Siempre nos comprenderán mejor si habla-
mos y damos alguna clave o mensaje que si
ALGUNAS CONSIDERACIONES no damos ninguna. De esta manera no cabe
RESPECTO AL EMISOR decir: «A mí nadie me comprende…». Si el
Debo fijarme en cómo me comunico cuan- otro no te comprende, es que tú te explicas
do soy emisor —¿soy claro, concreto y es- de forma inadecuada para él. Busca palabras,
pecífico en el contenido, el sentimiento y fórmulas que le lleguen para que te pueda
la demanda?—, ya que de esta manera no comprender. A menudo, es mejor afrontar
me lamentaré de que no me comprendan. la situación, por dura que sea, que huir o dar
Sucede que a veces las personas no nos com- largas. A veces hacemos esto por:
prenden porque somos ambiguos, vamos con 1. Temor al rechazo —en el fondo, es la idea
demasiadas interpretaciones o proyecciones errónea de que todos tienen que aceptar
de nuestro ser sobre los demás, lo cual hace lo que digo—. Y así, ante el temor de lo
que estos tengan un comportamiento o una que pueda decir o pensar el otro, no digo
comunicación distante, o simplemente que nada.
rehúsen nuestra comunicación. Ante esto, 2. Pretendemos que los demás nos adivinen
con frecuencia pensamos que la culpa está y, si no adivinan lo que queremos o pen-
en el otro, que no me entiende ni comprende, samos, nos enfadamos.
cuando es nuestra manera de comunicar la
que produce en el otro esa reacción. Soy yo Si tenemos todo esto claro, también ayuda-
el que no me comunico de forma clara y lo remos a que el paciente se comunique con
culpabilizo diciéndole que no me compren- claridad y no esté esperando a que nosotros
de: no me responsabilizo de lo que digo y vayamos adivinando o usemos comporta-
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cómo lo digo, y después me quejo y le echo mientos no verbales (lloros, quejas, etc.) para
la culpa al otro. decir lo que muy bien puede decir de manera
Debo expresarme en términos concre clara y precisa:
tos y claros, de manera que mi interlocutor
1. No me comunico o me comunico mal y
—en este caso el paciente—, sin que sea
encima me enfado.
un genio, un adivino o un profeta, pueda
2. Escoger un canal contaminado para el
comprenderme.
otro. Por ejemplo, no le gusta que le ha-
Exponemos algunas reflexiones persona-
bles de tal cosa o situación, y no paras de
les a este respecto:
hacerlo…
1. No juguemos a comunicarnos mal. A Todos sabemos que tenemos zonas deficien-
veces nos comunicamos mal porque nuestra tes y que nos molesta hablar o que nos hablen
autoestima está muy baja, y así, pienso que yo: de estas.
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68 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 69
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70 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
empatía le tendremos que decir, por ejemplo: antes no pasaba; si les hago alguna pregunta,
«Me duele y me preocupa no saber o poder siempre me responden que lo sienten, pero
ayudarle, y de verdad que lo siento; segui- que están muy ocupados. Incluso veo que
remos viéndonos, si le parece, a ver si entre cuando entra mi mujer y mi hija, aunque tra-
ambos podemos encontrar algo de luz». tan de disimular, han estado llorando. Cuan-
do pasa la visita el médico, mi familia no le
pregunta nada, pero en cuanto sale este de la
Ejemplos de entrevistas difíciles habitación, van corriendo a hablar con él…
que reflejan los puntos anteriores Como ve, son muchos detalles que me hacen
pensar que mi enfermedad se está agravando
Entrevista 1 (situación en la que el pa- y todos rehúyen decirme la verdad. Por tanto,
ciente nos dice: «Me voy a morir») le pido o le ruego que me diga si mi enfer-
Paciente Juan (Entra el profesional y le dice): medad es tan grave que me quedan pocos
«¿Tiene un momento, por favor?». días o semanas de vida, y así puedo hablar
Profesional: «Hola, Juan. No mucho, pero claramente de esto con mi familia, llorar y
creo que de momento le puedo conceder unos despedirnos, y como tengo cosas pendientes
diez minutos, y si necesitara más tiempo, pasaré en este mundo, pues hablarlas con mi mujer
en otros momentos y seguiremos hablando». para que luego no le quede todo eso y que no
Paciente: «De acuerdo. Mire, quiero sepa cómo resolverlas. Además, como no sé
saber si me voy a morir». lo que puedo encontrarme después, pues me
Aparentemente nos parece que su peti- gustaría hablar con el capellán del hospital».
ción o demanda es clara, pero recordemos Profesional (Aplica el feedback, además
lo siguiente: lo que está claro para mí solo lo de una gran empatía, con el fin de verificar
está para mí, y lo que está claro para él solo que le ha comprendido): «Mire, Juan, voy
lo está para él; por tanto, con calma, respire- a ver si le he comprendido bien. Me ha di-
mos hondo e intentemos centrarnos en los cho, en primer lugar, que ha ido observando
cuatro pasos que hemos señalado. Aquí el cómo el comportamiento nuestro, de los
paciente se centra en la demanda, pero noso- profesionales, e incluso el de su familia,
tros como profesionales tenemos que ver qué ha ido cambiando. Me imagino que esto ha
hay detrás de esta demanda, qué es lo que le provocado en usted una llamada de atención
pasa y cómo lo vive o lo siente —clarificar y de ansiedad sobre qué es lo que le está
el contenido—, y esto se consigue con una pasando [feedback y empatía al contenido
comunicación muy comprensiva o empática. o situación]. Ante esto, se está preguntando,
El profesional retoma mediante un feed- dado que no ve mejoría, si se va a morir,
back lo que le acaba de decir el paciente, y le y si es así, que le diga el tiempo que más
responde: «¿Podría especificar exactamente o menos le queda con el fin de despedirse
qué me quiere decir o espera de mí con esta de su familia, arreglar los asuntos de la Tie-
afirmación o pregunta de si se va a morir?». rra e incluso los del más allá [feedback a la
Como vemos aquí, el profesional sim- demanda], pues me imagino que todo esto le
plemente se centra en el paciente tratando de provoca mucha angustia y tristeza [feedback
clarificar lo que le pasa. y empatía sobre lo que se imagina que puede
Paciente: «Pues sí, mire, aquí tenemos sentir el paciente, sentimiento]».
mucho tiempo y entonces uno observa y Paciente: «Pues, si le soy sincero, dado
ve cómo se comportan ustedes, bien sean el tiempo que ya llevo dándole vueltas, hay
enfermeras o médicos, e incluso mi familia. momentos en que me siento con muchísima
Y veo cómo, desde hace un cierto tiempo, angustia y miedo [el paciente le confirma
todos han cambiado en la forma de tratarme; su sentimiento] y el hecho de clarificarme
los profesionales entran deprisa me ponen esto, aunque me cree mucho miedo, me va a
en el gotero la medicación, muchas veces permitir salir de esta situación de duda que
sin decirme cómo estoy, ni explicarme nada me está ahogando, pues no puedo hablar del
sobre la medicación que me ponen, cosa que tema, ni decir a mi familia cómo me siento,
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 71
verdad que siento muchísimo que la medica- pues a veces vamos a hablar con el paciente
ción no haga su efecto y nosotros no veamos y no solo no le decimos el tiempo del que
mejores resultados, pero también creo que disponemos, sino que tampoco le expresamos
irse enfrentando a esto, tal como usted me nuestro objetivo y mucho menos partimos
ha dicho, será más fácil para todos, pues po- de si el paciente, antes de aceptar nuestro
dremos hablar con más claridad. Ante lo que objetivo, quiere hablar sobre lo que le deci-
le acabo de decir, ¿cómo se siente y qué es lo mos, o nos puede escuchar porque está más
que le ayudaría en estos momentos?». pendiente de su problema que de lo que le
Paciente: «Mire, prefiero estar un ratito podamos decir.
solo, sin que nadie me moleste. Por favor, Paciente: «Estoy muy ansiosa y preocu-
dígale a mi mujer lo que hemos estado ha- pada por saber cuál es el diagnóstico, pues,
blando y que prefiero estar solo un rato, y que como puede suponer, una piensa siempre lo
luego pase y así hablamos». peor».
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72 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
Profesional: «Me dice que se siente muy Como vemos, si el profesional es au-
ansiosa y preocupada porque piensa lo peor. téntico, el paciente ya va captando que su
Sí, me imagino lo difícil que tiene que ser enfermedad no tiene buen pronóstico.
esta situación para usted y que se le habrán Profesional: «Efectivamente, por desgra-
pasado por la cabeza imágenes negativas de cia debo decirle que tiene cáncer y que está
todo tipo». ya un tanto avanzado. Pienso lo horrible que
El profesional le hace un feedback junto tiene que ser para usted y su familia escuchar
con empatía, con la finalidad de que el pa- esto. Por eso me gustaría saber qué piensa
ciente se sienta comprendido no solo a nivel que podría ayudarla en estos momentos tan
de contenido, sino también de sentimiento. difíciles».
Paciente: «Sí, no lo sabe usted bien las El profesional responde de una manera
ideas que se me pasan por la cabeza y la clara, concreta y con empatía a la demanda
angustia por la que estoy pasando, y que no del paciente.
quiero manifestar a mi marido e hijos para Paciente: «Pues como ya esto me había
que no sufran». pasado por la cabeza, y me lo suponía, prefie-
Profesional: «Pues sí, intento comprender ro que me diga cómo va a ser el tratamiento,
su situación, y créame que para mí es también si lo hay, y si ya no hay nada que hacer».
muy difícil hablar de su enfermedad, y sin Como vemos, ante una situación tan
embargo es necesario que lo hagamos para difícil el profesional se centra en la paciente
que le pueda hacer frente lo mejor posible. y esta le dice lo que desea del profesional.
Entonces, dígame por dónde quiere que co- Profesional: «Verá, dada la urgencia —por
mencemos». eso he venido a decírselo cuanto antes—, he
El profesional le muestra empatía y le mos pensado en el tratamiento siguiente…».
expresa cómo siente él esta situación; de es- El profesional explica al paciente y a su
ta manera se humaniza la relación —muy familia el tratamiento, y les va pidiendo un
distinto de lo que a veces parece sobre la feedback sobre lo que les está contando a
insensibilidad de los profesionales—; al fin de que así todo quede claro para Gema
mismo tiempo, esta actitud prepara para la y los suyos.
comunicación difícil. Una vez clarificada la situación, el profe-
Paciente: «Mire, quiero que me explique sional le dice: «Intento comprender lo difícil
a mí, a mi marido y a mis hijos, pues ya son y horrible que tiene que ser para todos es-
mayorcitos, tienen 15 y 17 años, la realidad cuchar esto, por eso vamos a poner manos a
de la enfermedad tal cual ustedes la ven [la la obra y, si lo estiman conveniente, comen-
paciente le ha hablado del contenido o de la zar cuanto antes. Y ya saben que estoy a su
situación]». disposición para cualquier duda, o también,
Profesional: «¿Cómo se siente al decirme si creen que se van a sentir mejor, pueden
esto?». consultar con otros especialistas, etc. Sepan
El profesional trata de ver cómo está vi- que, en lo que de mí dependa, intentaré ayu-
viendo la paciente la situación y le pregunta darles en todo lo que decidan que es mejor».
cómo se siente (sentimiento). El profesional con empatía ofrece a la
Paciente: «Me siento muy angustiada, paciente y a su familia la posibilidad de re-
pero creo que aunque sea muy duro lo que me flexionar sobre la situación, e incluso que
tenga que decir, es preferible saberlo a estar valoren otras posibilidades de diagnóstico,
con esta angustia y estas ideas tan horribles si así lo creen oportuno.
que ya se están convirtiendo en pesadillas».
Profesional: «Pues sí, y créame que por CÓMO DEBE RECIBIR EL MENSAJE
desgracia tampoco es fácil para mí hablar de
EL RECEPTOR
este tema».
Paciente: «Por lo que me acaba de decir, El receptor es la persona o destinatario al que
me temo que no me va a dar usted buenas el emisor dirige el mensaje, el cual lo recibe
noticias». a través de uno o más órganos sensoriales.
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74 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
FIGURA 5-9
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 75
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76 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
La comunicación siempre se debe a que etc., no soportaré los cambios, no podré es-
algo ocurre en su interior, se siente moles- cuchar, pues escuchar el mensaje del otro me
to, tiene algún sentimiento respecto a algo; obliga a confrontarme a situaciones frente a
podemos decir que el paciente se encuentra las que no me siento preparado.
en alguna clase de «desequilibrio». Para lo- Escuchar significa ponerse en una situa-
grar que su organismo regrese a su estado de ción de vulnerabilidad; pues escuchar significa
equilibrio, el paciente decide comunicarse que yo soy capaz, por ejemplo, de reconocer
con el profesional, para realizar cualquier la agresividad del otro hacia mí, de recono
comportamiento, etc. cer que el otro no se interesa por lo que digo
Todo esto exige que el profesional tenga o no quiere seguir el consejo que me gustaría
una actitud de escucha. Esta es una de las darle. De aquí que construyamos formas de re-
actitudes más difíciles de poseer. sistencia para no escuchar o para persuadirme
a mí mismo de que lo que escucho es lo que
yo quiero oír. Escuchamos de forma selectiva.
Escuchar es tratar de comprender al otro,
de captar su mensaje, sin poner sobre él Actitudes que debemos adoptar
nuestros propios sentimientos; es ser su para escuchar activamente
ficientemente acogedor, amable y neutro
para que el otro pueda abrirse hacia noso Actitudes físicas. Las actitudes no verbales
tros y pueda expresarse como es, sin sentir tienen una gran importancia en la comuni-
bloqueos en su comunicación. Escuchar cación, como se ha mencionado ya en el ca-
significa también clarificar lo que el inter pítulo 3. Además, estas son más importantes
locutor quiere decir. todavía como destreza de acogida, pues
muestran mejor el mundo de las emociones
La clarificación es una técnica que, utili- y los sentimientos.
zada conjuntamente con una buena habilidad Por esta razón, el profesional, conscien-
de escucha, mejora la capacidad de cualquier te de la importancia del lenguaje no verbal,
profesional de la salud, médico, enfermera, debe mostrar un gran interés por utilizar los
trabajador social, etc., para interactuar con comportamientos no verbales, expresando
éxito con sus pacientes. cordialidad al paciente.
La escucha supone una capacidad de Creemos necesario señalar algunas de
adaptación a las nuevas situaciones. En la me- las conductas que muestran acogida hacia
dida en que yo me sienta inseguro, ansioso, el otro.
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que la mirada puede engañarnos, pues ello profundamente. Esto permite reencontrar
forma parte de una educación sociocultural. una cierta calma que posibilite hablar de sus
Por tanto, puede variar, o a veces malinter- problemas.
pretarse o en ciertos casos rechazarse, puede
Escala para medir los niveles
traicionarnos o ponernos en evidencia. No
de atención corporal según R. Carkhuff
obstante, una mirada muy fija puede provo-
car en el interlocutor un cierto malestar; por Nivel 1. Falta de contacto visual
eso se recomienda no estar todo el tiempo Sentarse al lado.
con la mirada fija en el interlocutor, pues Repantigado en la silla o sillón.
puede sentirse amenazado. Algunos autores Distracciones externas.
proponen no mirar fijamente a los ojos sino Nivel 2. Falta de contacto visual
al centro entre los dos ojos, ya que esto le Sentarse de lado y cerca.
resulta menos amenazante al interlocutor. Por Inclinación moderada hacia atrás.
otra parte, conviene ir variando entre mirarle Ausencia de distracciones físicas.
y de vez en cuando dirigir la mirada hacia Nivel 3. Contacto visual
otra cosa. Sentarse correctamente enfrente con
El silencio. En el capítulo 3 abordamos encuadramiento de hombros.
ampliamente este punto. Aquí deseamos No reclinarse hacia atrás.
solamente recordar que un cierto silencio Apoyar los pies en el suelo.
muestra a nuestro interlocutor nuestra dis- Ausencia de distracciones externas.
ponibilidad y acogida, indispensable para la Nivel 4. Contacto visual
comunicación y la relación terapéutica, pero Sentarse correctamente enfrente con
que, como todo lenguaje no verbal, conviene encuadramiento de hombros.
clarificarlo y no interpretarlo, pues nos pode- Pequeña inclinación corporal hacia de-
mos equivocar. lante.
El paralenguaje. Definimos paralenguaje Apoyar los pies en el suelo.
como un conjunto de signos que acompañan Correcta distancia entre las sillas.
a la palabra. Por ejemplo, la fluidez verbal, Nivel 5. Contacto visual
el tono, la respiración, las repeticiones, la Sentarse correctamente enfrente con
energía en la pronunciación, etc. encuadramiento de hombros.
El hombre no solo comunica con el len- Mayor inclinación hacia delante.
guaje verbal, también su comportamiento, sus Cabeza erguida.
gestos, su mirada, su mímica, sus actitudes, Ausencia de distracciones.
el tono de la voz, etc., participan activamen- Correcta separación entre las sillas.
te en el acto de lo comunicativo y permiten Manos desocupadas y abiertas.
ajustar el nivel de la comunicación verbal. Actitudes psicológicas
El profesional expresa su atención al
paciente mediante sus comportamientos y «Observación». Consiste en la habilidad
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
expresiones. Si está interesado y tranquilo, le de observar al otro, y tiene que ver con la
comunica atención; si está nervioso y agita- habilidad de ver, clarificar y comprender las
do, le manifiesta su impaciencia por terminar; conductas no verbales de la otra persona.
si es coherente en su comportamiento de es- Su función es ayudar a una persona para
cucha, él comunica su interés. Si enrojece o que comprenda cómo se siente la otra, y có-
palidece, manifiesta al paciente diferentes mo está viviendo la situación o el problema
tipos de reacción. En su comportamiento de que nos está exponiendo.
escucha, el profesional debe ser coherente e ¿Cómo se logra la observación?:
íntegro, y no disperso y dislocado. 1. Aspectos físicos:
Frente a un paciente emocionado, al que a. Postura del cuerpo.
se le hace un nudo en la garganta, bloqueado, b. Expresión de la cara (mirada).
con signos de una cierta ansiedad o angustia, c. Gestos.
el profesional puede aconsejarle que respire d. Movimientos, etc.
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82 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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veremos cómo aumenta su confianza en una historia, de una existencia tal como se
sí mismos. manifiesta espontáneamente; de una exis-
7. Hay que aceptar que la forma activa de tencia que el paciente expone al profesional
escuchar parece poco natural al principio. a través de lo que percibe, recuerda, imagi-
Y sobre todo menos natural para nosotros na o actúa, y a través de lo que solicita del
que para nuestros pacientes. profesional.
8. No todas las respuestas de los pacientes
necesitan una retroinformación. Em- Escala para medir la escucha activa,
pléese la retroinformación o feedback según R. Carkhuff
únicamente cuando los sentimientos que Nivel 1. Muy inefectiva
nos exponen nuestros pacientes sean La información es imprecisa. No tiene
profundos, o cuando nos parece que es nada que ver con lo que ha dicho el pacien-
importante saber si hemos comprendido te. El profesional distorsiona el sentido del
lo que nos están exponiendo. mensaje.
9. Si nuestros pacientes necesitan informa- Nivel 2. Bastante inefectiva
ción, se la proporcionaremos, pero hay El profesional relaciona algún contenido
que asegurarse de: con lo dicho por el paciente, pero la infor-
a. Saber cuál es el problema verdadero mación más importante no la ha tenido en
antes de proporcionar información. cuenta. El profesional no responde al conte-
b. Averiguar directamente si el paciente nido esencial de lo expuesto por el paciente.
desea que le demos información. De Nivel 3. Efectiva
ser así, mejor será que sea breve. El profesional precisa el contenido prin-
c. Estar preparados para que rechacen cipal y esencial de lo que ha dicho el pacien-
nuestras ideas. te. No distorsiona esencialmente lo dicho por
d. En definitiva, recordemos que lo más el paciente.
importante es responder a la demanda Nivel 4. Bastante efectiva
exacta del paciente. El profesional da el contenido esencial
del nivel 3, pero incluso añade más detalles.
La escucha activa implica un compromiso Nivel 5. Muy efectiva
activo con el paciente, una disponibilidad El profesional ofrece un feedback del
frente a la experiencia inmediata vivida por contenido y el sentimiento que corresponde
él mismo y con el paciente, una aptitud para con fidelidad e intensidad a lo que acaba de
la sorpresa y una habilidad para escuchar expresar el paciente.
al paciente sin interpretarlo todo desde sus
propias experiencias. En la escucha activa, Feedback
el profesional permite a los pacientes expre- Creemos que el feedback o retroalimentación
sarse a su propio ritmo y como ellos deseen, es un punto clave para que el emisor se haya
o incluso que callen sin ejercer por ello pre- sentido escuchado. Solo sabremos si nos
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
sión o sin evaluar su silencio. Esta actitud hemos sentido comprendidos por nuestro
posibilita al paciente la autoexploración y interlocutor si este, mediante un feedback o
favorece la capacidad de este para precisar su retroalimentación, nos dice lo que le hemos
problema; por su parte, permite al profesional dicho y cómo hemos comprendido sus pala-
la manifestación de sentimientos, actitudes y bras. De aquí que sea un pilar fundamental
aptitudes que el paciente no ha manifestado en la comunicación.
de forma clara y concreta. Si la comunicación falla, uno de los
La escucha activa es también un acto de puntos importantes que se deben revisar es
reconocimiento, una identificación del otro, si hay o no feedback en las relaciones. Pero
que va más allá de los lazos establecidos en intentemos dar una definición de feedback.
los cuidados que se dan al paciente. Entendemos por feedback, respuesta-
No se trata de un reconocimiento de la reflejo o retroalimentación, la actitud de
identidad civil, sino del reconocimiento de devolver al paciente lo que este le acaba
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84 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
de decir, tanto el contenido como el senti vida diaria a ser contradicho o criticado en
miento o la demanda. Y se trata de decír- sus puntos de vista).
selo tal cual el receptor lo haya captado Por otra parte, esta le permite entrar to-
(lógicamente no se trata de repetir lo que talmente en su mundo personal subjetivo y
el paciente le ha dicho, como lo haría un de esta forma facilitar la toma de conciencia
magnetófono o un loro). El feedback per- autónoma de la experiencia vivida:
mite al paciente saber si este ha sido verda 1. Evita la desagradable impresión de dia-
deramente escuchado por el profesional. logar en el vacío.
El feedback o retroalimentación posibilita 2. El profesional se asegura de no introducir
a los individuos devenir conscientes de la nada diferente de lo que acaba de es-
influencia que tiene su comportamiento cuchar.
o lo que acaban de decir sobre el otro, y 3. Permite al paciente estar seguro de haber
de percibir lo que los otros piensan de sus sido comprendido y, por consiguiente,
acciones o de lo que acaban de decir. continuar expresándose. Permite al pro-
Con lo expuesto hasta ahora podemos fesional comprobar que él ha escuchado y
concluir que solamente el emisor se sen- comprendido lo que le ha dicho el pacien-
tirá realmente escuchado si el receptor le te y, en caso de error, puede rectificarlo
devuelve mediante un feedback lo que es- fácilmente. Es como una especie de es-
te ha captado —tanto el contenido, como pejo que el profesional ofrece al paciente
el sentimiento y la demanda— de lo que el para que este se vea reflejado en él.
emisor ha dicho. 4. Facilita el desvelamiento de lo que
Una forma observable de manifestar esta permanecía latente y también permite
escucha activa es el feedback al contenido aportar algo nuevo en la medida en la
y al sentimiento de lo que acaba de decir el que se dé al paciente la posibilidad de
paciente; además, el feedback revela si las ver de otra forma su propia percepción
actitudes rogerianas (empatía, autenticidad, (Muchielli, 1984).
aceptación incondicional), de las que más 5. La reformulación permite una confronta-
adelante vamos a hablar, han sido bien inte- ción menos amenazante para el paciente.
gradas por el profesional. El feedback es tam- 6. Permite al paciente expresar cuál es la
bién una de las consecuencias de la empatía. causa de su malestar, sin que se sienta
Consiste en reflejar, resumir, parafrasear o amenazado por preguntas.
acentuar la comunicación manifiesta o im- 7. Permite estar seguro de que el paciente
plícita del paciente. ha comprendido el tratamiento y lo va a
No basta con que el profesional perciba llevar a cabo.
al paciente como este se percibe a sí mismo. Por ejemplo:
Es necesario que le transmita esta identidad
percibida. El medio más adecuado para con-
seguirlo es la respuesta refleja o feedback.
Aunque parezca simple, el feedback re- Profesional: «Hace un momento usted
quiere una buena escucha activa, pues necesi- ha manifestado el deseo de querer hablar
ta reproducir la comunicación del paciente en conmigo».
los mismos términos en los cuales este lo ha Paciente: «Sí, yo he hablado ya otras
expresado. Por otra parte, es un medio muy veces con otros profesionales» (mujer de
práctico de hacer comprender al paciente que una cierta edad).
se participa de su experiencia (Kinget, 1971). Profesional: «Sí…».
Paciente: «Yo…, sabe usted, mi pro
Beneficios de la respuesta-reflejo blema es el alcohol».
o feedback Profesional: «Sí, me parece que la com
prendo, usted continúa bebiendo, ¿no es
En primer lugar, ejerce un efecto saludable, eso?».
a la vez que relajante y estimulante, sobre Paciente: «Sí, porque me siento muy
el paciente (habituado con frecuencia en la sola».
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 85
Profesional: «Es decir, que usted comba A un nivel superior, el feedback es una
te la soledad con el alcohol». información sobre la recepción de una infor-
Paciente: «Sí, es eso, y no sé qué puedo mación anterior.
hacer… porque todos los días me pasa
Queremos hablar en este caso de la me-
igual».
Profesional: «Veamos si es igual todos
tacomunicación que en 1951 Bateson definió
los días […]». como «la comunicación sobre la comunica-
ción y que tiene por objetivo la retroacción
Según la escala de R. Carkhuff de medir de los códigos y las relaciones utilizadas por
la empatía, que expondremos al hablar de los interlocutores».
ella, podemos decir que el profesional está Por ejemplo:
en el nivel 4. El profesional ayuda al pacien-
te porque este se siente comprendido y no Profesional: «Buenos días, señora».
evaluado o juzgado por aquel. Paciente: «Tengo una gran dificultad
Algunos principios que debe respetar para hablar… para hablar de mí [silencio
de 20 segundos]».
el profesional
(El respeto del silencio permite al
1. Reflejar el contenido y el sentimiento que paciente avanzar a su propio ritmo; si el
el paciente acaba de formular. silencio se prolonga demasiado durante los
2. Dejarle desarrollar su punto de vista. primeros contactos, el profesional puede
3. Aceptar el contenido y los sentimientos utilizar el feedback y decir: «Estoy perci
del paciente sin ninguna evaluación, jui- biendo la dificultad que usted tiene para
cio o interpretación; son los suyos y tiene hablar».)
Paciente: «Cada vez que cuento a otras
derecho a sentir lo que siente.
personas algo de mi vida se burlan de mí».
4. Describir la situación que manifiesta el Profesional: «Al percibir que otras per
paciente con el fin de que este pueda sonas se ríen de usted por lo que dice, le ha
tomar conciencia de su responsabilidad de producir tristeza. ¿Podría usted ponerme
en lo que le sucede. un ejemplo para comprenderla mejor?».
5. Centrarse en lo que ha dicho el paciente (El profesional anima a la paciente a que
para que este pueda profundizar en lo que hable. Esto permite explorar el significado
acaba de expresar. de lo enunciado por ella.)
Paciente: «Bien, la semana pasada
¿Cuándo se debe hacer comencé a hablar con un compañero. Yo
la respuesta-reflejo? le dije que acababa de saber que tenía un
tumor. Y todo lo que hizo fue darme unas
Se aprovechará el momento en que el sujeto
palmaditas en la espalda y decirme: “Los
ha manifestado una parte de su vivencia o tiempos son duros, ¿verdad?”».
problema cuando haya dicho algo que nos Profesional: «Al escuchar lo que le dijo
parezca importante. También cuando el su compañero, ¿cómo se sintió usted?».
paciente: (Explorar la reacción personal de la
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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86 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
Vemos cómo los hechos que conciernen ser empático consiste en darse cuenta con
a la paciente y que caracterizan lo que le precisión del cuadro de referencias interno
sucede se repiten frecuentemente.) de la otra persona, justamente con los com-
Paciente: «Es posible… Yo no le conoz
ponentes emocionales y los significados a
co y no sé cómo va a reaccionar; sin embar
go, usted me inspira… Usted no parece ser
ella pertenecientes, como si fuéramos la otra
el tipo de persona que pase de los demás, persona, sin perder nunca la condición de
pero ¿cómo puedo estar segura?». “como si”. Significa, por tanto, sentir las
Profesional: «Tengo la impresión de que amarguras y las alegrías de la otra persona de
usted se pregunta si debe confiar en mí». la misma manera que ella las siente y percibir
(Esta intervención hace surgir la metaco sus causas de la misma manera que ella las
municación o tema subyacente a la preocu percibe, pero sin perder la noción de que es
pación principal de la paciente. Le refleja “como si” estuviéramos tristes o alegres, etc.
lo que parece ser el problema principal de Si perdemos esta condición de “como si” ten-
la paciente, permitiendo a esta confirmar
dremos un estado de identificación».
o corregir la percepción del profesional.)
Paciente: «Un poco… Espero no ofen
El paso de la empatía terapéutica a la
derle por esto». simpatía es un peligro fácil en espacios
Profesional: «Entonces… dígame usted, terapéuticos. Un agente de salud, social o
¿cómo se siente conmigo en este momen educativo, que quiere ayudar al otro debe es-
to?». tar atento a prevenir sus posibles tendencias
(La relación pone de manifiesto la im a deslizarse desde la comprensión del otro
portancia de la confianza y la necesidad hacia su identificación con él. Bermejo, ci-
de dialogar de forma satisfactoria. Esta tando a Rifkin (2010), nos dice: «La empatía
hace surgir también el estrés normal que supone un equilibrio delicado. Tenemos que
se produce en toda relación. Esta forma de
estar abiertos a sentir el sufrimiento del otro
actuar evita tranquilizar prematuramente a
la paciente con el fin de que la confianza
como si fuera nuestro, pero sin que este su-
pueda desarrollarse y de que se pueda eva frimiento nos engulla y anule la capacidad
luar de forma periódica.) del yo para ser un ente único y separado. La
empatía requiere un límite poroso entre el
“yo” y el “tú” que permita que las identidades
Empatía de dos seres se reúnan en un espacio mental
Vamos a centrarnos ampliamente en la empa- común».
tía, ya que se trata de una herramienta esen- Entendemos por empatía la capacidad de
cial e imprescindible, no solo para establecer comprender (percibir) correctamente lo que
buenas interacciones con las personas con experimenta nuestro interlocutor:
las que nos relacionamos, sino también para 1. Comunicarle esta comprensión.
llevar a cabo de forma adecuada cualquier 2. Utilizar un lenguaje acomodado a sus
trabajo que exija una relación personal. Por sentimientos y entendimiento.
otra parte, para los profesionales de la salud,
la empatía es una competencia emocional La actitud empática supone:
que debemos poseer y, por lo tanto, se puede
aprender. 1. La capacidad para ponerse auténtica-
mente en el lugar del paciente y ver el
Definición de empatía mundo como él lo ve. Para ello no basta
En su libro Empatía terapéutica, Bermejo solo con captar y entender sus palabras,
(2012) nos dice: «Es la capacidad de percibir sino lo que hay detrás de ellas y de los
el mundo interior de la otra persona, inte- gestos…, o sea, los sentimientos y las
grado por significados personales y priva- emociones que intenta transmitir con
dos, como si fuera el propio pero sin perder las palabras.
nunca ese “como si”». Y continúa: «Rogers 2. Supone también penetrar en ese mundo
(1994) insistirá en diferentes momentos en de percepciones del paciente y sentirse
este “como si”. El estado de empatía o de totalmente a gusto en él. Requiere tener
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sensibilidad para captar sus sentimientos aceptemos como algo propio de la persona.
de miedo, rabia, ternura, preocupación De esta manera no nos extrañaremos de las
o lo que en ese momento suponga una actitudes del paciente.
vivencia para él, sea lo que sea. Sig- Cada profesional debería saber recono-
nifica vivir en ese momento su vida y, cer sus propios sentimientos y no sentirse
por tanto, evitar emitir juicios, críticas, amenazado o culpabilizado por lo que está
evaluaciones sobre su situación o el sintiendo. Los sentimientos son muy varia-
problema que nos está comunicando. bles a la vez que pasajeros, y surgen en noso-
Goleman (2009) nos dice: «La esencia tros con una espontaneidad extraordinaria.
de la empatía consiste en darse cuenta de Toda persona sabe que puede vivenciar en
lo que sienten los demás sin necesidad un instante un sentimiento de tranquilidad
de que lleguen a decírnoslo. Asume dife- y pasar al minuto siguiente a tener uno de
rentes grados que van desde la capacidad preocupación ante cualquier noticia que se le
de captar e interpretar adecuadamente comunica. Los sentimientos no son ni buenos
las emociones ajenas, hasta percibir y ni malos. Lo malo o lo negativo es el com-
responder a sus preocupaciones o senti- portamiento que podemos tener como con-
mientos no expresados y comprender los secuencia de ciertos sentimientos; como, por
problemas que se ocultan detrás de otros ejemplo, la persona que ante la enfermedad
sentimientos». se siente desesperada e intenta suicidarse;
3. Supone transmitir al paciente cómo es- o bien, el paciente que tiene sentimientos
tamos sintiendo nosotros, los profesio- de culpabilidad y, avergonzado, cae en un
nales, lo que nos está comunicando. mutismo, etc.
4. Significa valorar con el paciente las Si cada profesional comprende bien sus
preocupaciones y los problemas de propios sentimientos, si se acuerda de cómo
este, pasando a ser persona de su con- él se sentía cuando ha estado enfermo o tenía
fianza, de su mundo interior. Estar con algún problema serio, si capta lo que pasa
los pacientes, en esta forma que indi- en su interior, podrá tener una actitud más
camos, significa dejar de lado, en esos empática con los pacientes, los comprenderá
momentos, nuestros puntos de vista y mucho mejor. Si se dice a sí mismo: «Soy
valores propios, para entrar en el mundo una persona humana y nada de lo humano
del paciente sin ideas preconcebidas. Es me puede extrañar», tiene el terreno prepa-
comprender que cuando los pacientes rado para una escucha activa más eficiente
actúan de una determinada forma, debe (Rogers, 1968).
haber alguna razón importante para R. Carkhuff, discípulo de C. Rogers, ha
ellos como, por ejemplo, el hecho de establecido una serie de escalas, las cuales
que tengan «ideas raras», «gustos es- permiten que podamos evaluar y verificar si
peciales», etc. Debe tener algún sentido tenemos o no buenas actitudes como recep-
para ellos toda esa serie de aficiones y tores. Establece sus escalas con niveles que
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FIGURA 5-13 A. Filtros con los que captamos la realidad. B. Filtros al expresar la realidad captada.
los detalles con los que hemos filtrado la Otro ejemplo: le digo a un alumno que
realidad, sino que se suele tender a emitir nos hable de algún pueblo que haya visitado
la captación de la realidad o el mensaje y que nos lo describa. A veces ha estado
de forma general, olvidando los deta- varios días en ese pueblo y a la hora de des-
lles, los cuales dan la especificidad de lo cribirlo nos dice frases como estas: «Es un
vivido o filtrado; expresar el mensaje de pueblo pequeño» (generalización); «Es muy
forma generalizada nos lleva a que este bonito» (generalización e incluso distor-
se dé haciendo grandes eliminaciones sión, pues bonito, feo, etc., son valoraciones
de aspectos que pueden ser incluso muy muy personales); «Tiene edificios antiguos»
importantes, o bien a que, sin darnos (generalización y eliminación, pues ¿qué
cuenta, estemos distorsionando la can- quiere decir con «edificios antiguos»?);
tidad de información que uno tiene y el «Tiene pocos habitantes», etc. Como se
otro no. Todo esto nos lleva a una mayor aprecia en todas estas descripciones, lo que
complicación de la comunicación y a hace es construir una imagen muy personal
una mayor dificultad para entendernos, del pueblo que nos narra, pero es imposible
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pues lo que el interlocutor ha captado, tener en nuestra mente una foto real de cómo
a la hora de manifestármelo, resulta que es en realidad ese pueblo. Si dijera: «¡Oh!,
elimina o generaliza tanto que es difícil qué pueblo más bonito, más aburrido…»,
comprenderlo. Pongamos un ejemplo: estaría hablando de la imagen que yo me
he hecho del pueblo, no del pueblo que es
en realidad.
Un alumno que ha estudiado durante varios Todos estos filtros nos llevan a darnos
días, a la hora de responder al examen cree
que sabe la materia, pero lo que aparece en
cuenta de la importancia de la empatía ma-
el examen son grandes generalizaciones: ha nifestada con el feedback si queremos com-
eliminado cantidad de detalles y en muchos prender al otro y que el otro nos comprenda.
casos hasta ha distorsionado la realidad Sabemos que practicar la empatía es muy
(fig. 5-13). difícil, pero si queremos comprendernos no
vemos otra alternativa.
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94 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 95
se lo reprocha sin tener en cuenta por qué está conozca. Mediante este gesto, yo permito que
así, o qué es lo que le ha provocado el enfado. el otro me ame.
La persona nos aparece como un mis- Pero cuando una persona no se revela
terio. No podemos predecir lo que hará. No totalmente a sí misma, pierde el contacto con
conocemos su pasado e ignoramos lo que la realidad y aparece la enfermedad.
ocurre en su interior. Es también un hecho evidente que una
Escuchemos lo que a este respecto nos persona no puede llegar a conocerse si no
dice C. Rogers (1967): se revela al otro. Cuando alguien es capaz de
revelarse completamente a otro, aprende a
aumentar sus contactos con su yo auténtico
«[…] ¿Soy yo capaz de experimentar actitu
des positivas hacia el otro: calor, atención, y puede estar más capacitado a partir de este
afecto, interés, respeto?» momento para dirigir su destino partiendo
«Solemos tener grandes dudas a la hora de lo que conoce de sí mismo. Veamos lo que
de experimentar estas actitudes positivas nos dice C. Rogers:
hacia el otro, ya que estas pueden someter
nos a una serie de exigencias con respecto a
nosotros mismos o producirnos una decep «[…] ¿Soy capaz de respetar enérgicamente
ción y tememos las posibles consecuencias. mis propios sentimientos, mis propias nece
También tenemos tendencia a establecer sidades como respeto las del otro? ¿Puedo
una distancia entre nosotros y los otros.» poseer y experimentar mis propios senti
«[…] En el campo clínico desarrolla mientos como algo propio e independiente
mos diagnósticos con formulaciones com de los sentimientos del otro? ¿Soy bastante
plicadas a través de los cuales la persona fuerte e independiente para no deprimirme
es tratada como un objeto […] Yo tengo la por su depresión, angustiarme por su angus
impresión de que, de esta manera, podemos tia o dejarme absorber por su dependencia?
evitar experimentar el interés que sentiría ¿Mi yo interior es suficientemente fuerte
mos si reconociéramos que se trata de una para sentir que no soy destruido por su
relación entre dos personas.» cólera, ni invadido por su dependencia, ni
reducido a la esclavitud por su amor, sino
que existo independientemente de él con
¿Qué ocurre cuando se escucha y las per- sentimientos y derechos propios? Cuando
sonas revelan su verdadero yo a los otros? He puedo sentir con fuerza mi propia indepen
aquí algunas consecuencias posibles: dencia, entonces descubro que me puedo
consagrar más a comprender al otro y acep
1. Toman conciencia de hasta qué punto tarlo porque no temo perder mi propio yo.»
son iguales o diferentes de los otros en «[…] ¿Mi seguridad interior es bas
cuanto a pensamientos, sentimientos, es- tante fuerte para permitirle ser sincero o
peranzas, reacciones, etc. hipócrita, infantil o adulto, desesperado
2. Toman conciencia de las necesidades de o presuntuoso? ¿Puedo permitirle que sea
la persona, y de este modo son capaces libremente él mismo?, o bien ¿siento que él
de ayudarla y de ver que sus necesidades debería seguir mis consejos o permanecer
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«[…] ¿Soy capaz de ver al otro como «Cuanto más comprendido y aceptado
una persona en evolución, o por el contra se siente el paciente, más fácil le resulta
rio permanezco atado a su pasado o al mío? abandonar los mecanismos de defensa con
Si en mi relación con el otro lo trato como
que ha encarado la vida hasta ese momento
a un niño inmaduro, como a un alumno
ignorante, como a una persona neurótica
y comenzar a avanzar hacia su propia madu-
o psicótica, cada uno de estos conceptos ración» (Rogers, 1968).
pone límites a nuestra relación. M. Buber La aceptación supone «un cálido respeto
utiliza la expresión: “confirmar al otro”, sig hacia la persona, como individuo valioso,
nifica […] aceptar todas sus potencialidades independientemente de su condición, con-
[…] Yo no puedo conocer en él a la persona ducta o sentimientos…, al margen del carác-
que puede llegar a ser. Yo le confirmo en mí ter negativo o positivo de sus actitudes. Esa
mismo y en él mismo las potencialidades aceptación de cada uno de los aspectos de la
que puede desarrollar y lo que puede evo otra persona le brinda calidez y seguridad en
lucionar» (Rogers y Kinget, 1967).
nuestra relación» (Rogers, 1968).
Bermejo (2012) nos dice: «Quien trans- Expresión del respeto por parte
mite con las palabras, pero especialmente con del profesional
la “mirada” (no solo la de los ojos), que está
dispuesto a acoger cualquier cosa, que nada El respeto no se comunica mediante palabras
desencadenará juicios moralizantes, que («yo te respeto», «respeto tu forma de ser y
nada sorprenderá tanto al terapeuta como pa- de pensar»), sino a través de las acciones. Y
ra no seguir comprendiéndolo y haciendo el se manifiesta a través de:
apasionante viaje al interior de una biografía 1. La voluntad de estar a disposición del
personal […] quien se comporta así, genera paciente: disposición para emplear el
una confianza tal que permite abrir el baúl tiempo y la energía necesarios en cuanto
del corazón y liberar aquello que empieza a los pacientes nos necesitan y nosotros
intuir que puede ser comprendido sin límite podemos. Muchas veces perdemos el
alguno». tiempo en cosas banales; deberíamos
El profesional que respeta a su paciente preguntarnos si son tareas más urgentes
cree en él, lo escucha atentamente y se abs- que el escuchar al paciente.
tiene de caer en lo que Gordon llama las ba- 2. Viendo al paciente como una persona
rreras de la comunicación (que señalaremos única: los profesionales deben fomentar
más adelante) y que nosotros llamamos la propia individualidad de cada paciente
también obstáculos a la comunicación y al y contribuir a su desarrollo constructivo
crecimiento personal. considerando esta individualidad como
Cuando nos sentimos libres para ser un valor en sí mismo. No se trata de exi-
nosotros mismos en presencia de otra per- gir que todos los pacientes sean iguales
sona, es porque nos sentimos respetados por en sus actitudes y comportamientos.
el otro. Cuando un paciente se siente libre 3. Viendo al paciente como tendente a
para ser él mismo con el profesional es por- la autonomía: el respeto se manifestará
que este último le respeta. Nada resulta tan de una forma más auténtica partiendo de
gratificante como escuchar de un paciente la consideración que los pacientes tie-
lo siguiente: «Con usted siento confianza y nen de sí mismos, de sus cualidades y
libertad para comunicarme como yo soy». recursos, los suficientes como para ser
El respeto implica «el aprecio de la digni- capaces de enfrentarse a su enfermedad.
dad y valor del paciente y su reconocimiento Estas cualidades pueden estar bloqueadas
como persona». o impedidas, bien por la educación, la
Se parte, por tanto, de una consideración enfermedad, o bien porque no han sido
hacia la libertad del paciente y su derecho a estimulados e informados lo suficiente
tomar las decisiones que él considere más para que las pongan en funcionamiento,
convenientes. y tarea nuestra como profesionales es
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 97
lograr que ellos descubran esas cualida- Nivel 2. El profesional no ayuda cuando:
des y las ejerzan. 1. No se centra en lo que vive, siente y ma-
4. Respetando la intimidad del paciente: nifiesta el paciente, sino en lo que debería
la falta de respeto a la intimidad del sentir, vivir o manifestar.
paciente también dificulta la empatía. 2. No se respeta a sí mismo y, por tanto, no
Esta falta de respeto se da cuando des- se permite ser él mismo.
cuidamos el pudor del paciente durante
la exploración física o los cuidados que Nivel 3. El profesional comienza a ayudar
exigen intimidad, así como en la intro- cuando:
misión inoportuna en aspectos íntimos 1. Escucha lo que vive y siente el paciente,
durante la entrevista clínica o el descuido y la manera de utilizar sus recursos.
del entorno asistencial (entrada de otras 2. Acepta los sentimientos del paciente de
personas, despertarle bruscamente, las forma empática.
luces, los ruidos, la forma de entrar en su 3. Permite libremente la expresión de senti-
habitación, que es como su casa, su inti- mientos del paciente y también comparte
midad, etc.). Siempre que estemos ante sus propios sentimientos.
el paciente, pensemos: si estuviera en su
lugar, ¿me sentiría respetado y tratado Nivel 4. El profesional ayuda cuando:
con delicadeza? 1. Manifiesta un respeto profundo por lo que
Sugerencias sobre cómo expresar vive y siente el paciente.
el respeto 2. Anima al paciente a ser él mismo como
individuo único.
La actitud hacia el paciente es respetuosa si: 3. Confirma al otro, aceptando todas sus
1. Te preocupas de su bienestar y de la cali- potencialidades y capacidades.
dad de los cuidados y no das preferencia
Nivel 5. El profesional ayuda aún más
a otros intereses u «obligaciones».
cuando:
2. Ves a cada paciente como un ser único,
más que como un intento de que sea co- 1. Acepta la manifestación profunda de los
mo tú eres o quisieras. sentimientos del paciente.
3. Lo ves capaz de tener sus propias cualida- 2. Se respeta a sí mismo y no juega a ser un
des e ideas y le estimulas a que las ponga profesional frío y distante.
en práctica. 3. Crea relaciones que facilitan el creci-
4. Ayudas al paciente con tu aliento y apo- miento del otro como persona indepen-
yo, y sin condiciones. diente.
5. Te guardas cualquier juicio crítico sobre 4. Manifiesta sus propios sentimientos fren-
su persona y sus comportamientos. te al sentimiento del paciente, ayudándo-
6. Le animas a que se exprese libremente. le al mismo tiempo a aceptar la realidad
7. Etcétera. y a poder reestructurarla.
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98 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
ciertos comportamientos inadecuados del «[…] Por esta razón, me parece que la
paciente, le dice: «Qué gracioso es usted». lección fundamental que debe retener el que
Para ser eficaz, la autenticidad debe ser desea establecer una relación de ayuda, sea
dosificada, pues si el paciente es incapaz de cual sea, es en definitiva que debe mostrarse
saber aprovecharla, puede ser nocivo e inútil tal cual es. Si en una relación dada, mi actitud
que el profesional la utilice. Sabemos que la es bastante congruente, si ningún sentimiento
franqueza no es siempre la mejor política que surja en esta relación es ocultado, ya sea
hacia los pacientes, especialmente si esta por mí mismo o por el paciente, entonces
se hace de forma brutal y si el paciente es puedo estar casi seguro de que la relación
incapaz de aceptarla. ayudará.»
Sin embargo, si el paciente ve autentici- El aprendizaje de la congruencia es el
dad en el profesional, hay una mayor posibi- meollo de la relación de ayuda y constituye
lidad de que sea más auténtico y confíe en él el objetivo último para el profesional y el
más fácilmente. paciente. «[…] Una forma de expresar esto,
Vamos a desarrollar algunos aspectos de que puede parecer extraña, es que si yo puedo
esta actitud, partiendo de la definición de formar una relación de ayuda conmigo mis-
Rogers (1978): «He empleado la palabra mo, si yo puedo ser afectivamente consciente
“congruencia” para designar lo que yo que- de mis propios sentimientos y aceptarlos,
rría ser. Yo entiendo por esto que mi actitud entonces hay muchas más posibilidades pa-
o el sentimiento que yo experimento, sea cual ra que yo pueda establecer una relación de
sea, esté de acuerdo con la conciencia que yo ayuda hacia cualquier otro.»
tengo de mí. Cuando este es el caso, yo me «Ahora bien, aceptarme tal como yo
comporto como una persona íntegra y unida, soy y permitir a la otra persona que se dé
es entonces cuando yo puedo ser quien soy cuenta de ello es la tarea más difícil que co-
en lo más profundo de mí mismo. Esto es nozco y jamás la he conseguido totalmente.
una realidad que, según mi experiencia, es Pero el hecho de darme cuenta de que esto
percibida por el otro como un signo de se- es mi tarea me ha enriquecido: esto me ha
guridad». (Hay personas que dicen que esto permitido conocer por qué ciertas relaciones
es una utopía; sin embargo, nosotros hemos interpersonales han sido bloqueadas y, por
verificado la experiencia de Rogers y cree- consiguiente, darles una dirección más cons-
mos que es posible y muy positiva.) tructiva.»
La congruencia es, para Rogers (1978), Debemos ser para el paciente un «mode-
una característica esencial de la persona lo». Creemos que, cuando el profesional re-
emotivamente sana y, por esta razón, dicha presenta un modelo de honestidad, es proba-
congruencia favorecerá las relaciones sanas y ble que el paciente acepte la invitación. Al no
de ayuda, al darse una correspondencia entre mostrarse a la defensiva, las interpretaciones,
lo que piensa, siente, dice y manifiesta con las sugestiones y los consejos del profesional
su comportamiento. Esta característica exige le suponen un fuerte impacto y favorecen su
del profesional la ausencia de ambigüedad. desarrollo.
«Analicemos una cuestión que linda con El paciente vive una situación de crisis,
la anterior: la expresión de mí mismo puede de ambivalencia, de falta de unidad; le con-
ser tal que me permita comunicar sin ambigüe- viene entrar en contacto con alguien que sepa
dad. Me parece que casi cada vez que yo he manifestar congruencia. El paciente a menu-
fracasado en una relación de ayuda, mi fracaso do está enfermo porque oculta su verdadero
se ha debido a una respuesta insatisfactoria a yo al relacionarse con los otros.
estas dos cuestiones. Cuando mi actitud refleja La relación de ayuda o terapéutica no
el rechazo que yo experimento ante alguien y pretende solamente hacer desaparecer los
se lo comunico de forma distorsionada, esto principales síntomas, sino también modificar
produce cierta confusión en la otra persona, el comportamiento interpersonal, convertir
y la hace menos confiada, si bien esta no es un modo generador de síntomas (manipu-
consciente en muchos casos de lo que ocurre.» lación de sí mismo y de los otros) en otro
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 99
generador de personalidad sana, que persis- de establecer con el paciente una relación de
tirá. Este es el comportamiento auténtico, que amistad, de amabilidad y de benevolencia,
contrasta con el interpersonal trucado, falso ni tampoco de un cierto «profesionalismo»,
y equívoco, que nos hace aparentar lo que no entendido este como distancia, frialdad, falta
somos y nos produce, a veces, la enfermedad. de sensibilidad o de afecto hacia el paciente.
Estamos cada vez más convencidos de Se trata, por tanto, en este contexto (de calor
que en los pacientes se produce un fuerte humano y comprensión), de establecer una
cambio de crecimiento personal cuando el calidad de acogida hecha de bondad, res-
profesional funciona con libertad y se per- ponsabilidad e interés desinteresado.
mite ser verdaderamente él mismo, es decir, S. Nacht (1963) nos dice de este calor
con todos sus sentimientos, capacidades que «no puede expresarse, ni mediante las
intelectuales e incluso caprichos. palabras ni mediante gestos afectuosos, sino
También hemos experimentado que los únicamente mediante una manera de ser inte-
que ocultan habitualmente su verdadero yo rior». En esta transmisión lo que cuenta es que
a los otros, y que además intentan influir en sea él mismo, más que lo que piensa o decide
ellos en un sentido o en otro, agreden a su ser racionalmente. Esto implica la firme vo-
propia integridad y a la de los demás. Un luntad de no aparentar, sino de presentarse al
comportamiento que no beneficie al profesio- paciente auténticamente como uno es.
nal tampoco beneficiará al paciente. Los pa- La actitud del profesional no puede ser
cientes nos reclaman porque se sienten como sentida como beneficiosa para el paciente
extraños consigo mismos y no son capaces más que en la medida en que este la percibe
de conocer y comunicar verdaderamente con como profundamente verdadera y natural.
los otros. Para poder llegar a semejante autenticidad,
Un profesional que se muestra preocu- se requieren dos condiciones esenciales: por
pado por su paciente es percibido por este una parte, una madurez emocional; por otra,
como una persona de buena voluntad. Todo un buen conocimiento de uno mismo.
paciente ocultará su verdadero yo a los que En la madurez emocional debemos tener
sienta como no auténticos. en cuenta dos aspectos primordiales:
Observación: Me parece importante
hacer una observación acerca de lo que aca- 1. El primero reside en la capacidad de
bamos de exponer. Ser auténtico no significa participar en la empresa de cambio del
falta de sentido común, prudencia y juicio o paciente sin caer en la tentación de mode-
delicadeza. Ser auténtico no significa decir larlo según la imagen del profesional. En
al paciente todo lo que a uno se le pasa por efecto, es fácil, cuando uno se siente bien,
la cabeza. querer imponer al otro nuestras experien-
El profesional de la salud debe ser au- cias, o darle lo que uno tiene o posee.
téntico, congruente. Esta autenticidad, según Este aspecto de la madurez emocional
C. Rogers, es la base de las otras actitudes o puede describirse como la capacidad y la
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100 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
los sobrepasa. Tal capacidad presupone Por otra parte, si la profesional le contes-
que las necesidades fundamentales del tara: «Pero ¿usted ha tomado conciencia de
profesional están organizadas en torno que lo que va a hacer es un crimen?», es-
a ciertas fuentes de satisfacción que dan to también sería una falta de autenticidad,
sentido y valor tanto a su existencia como pues confunde la autenticidad con la falta de
a su vida profesional. delicadeza, prudencia o respeto incondicional
hacia la paciente.
La autenticidad está íntimamente relacionada
con el respeto hacia el otro, pues solemos Comportamientos que favorecen
ser más auténticos con las personas que nos la autenticidad
son queridas. Ser auténticos en la escucha y la ayuda a los
Si el profesional ignora sus tendencias pacientes tiene implicaciones tanto positivas
sistemáticas, si no tiene conciencia de sus como negativas: significa hacer unas cosas y
actitudes y necesidades dominantes que son no hacer otras. Los profesionales deberán:
las suyas y que determinan sus aversiones,
prejuicios, miedos, deseos, etc., entonces 1. Expresar directamente al paciente lo que
será incapaz de poder hacerse una repre- están experimentando en ese momento
sentación realista de las cosas que le pre- de la comunicación.
senta el paciente, dejándose invadir por sus 2. Comunicarse con el paciente sin dis-
errores, de los cuales el paciente sufrirá las torsionar sus propios mensajes.
consecuencias. 3. Responder lo antes posible a la necesidad
Mirar las cosas bajo el prisma de nuestra del paciente, o darse el tiempo suficiente
personalidad implica el peligro de ver lo que para encontrar una respuesta correcta.
nos presenta el paciente bajo un aspecto com- 4. Buscar más la independencia y la auto-
pletamente subjetivo y no objetivo. nomía del paciente que su dependencia.
Pongamos un ejemplo: 5. Ser consecuente: se trata de no demos-
trar discrepancias significativas en nues-
tras vidas. No tener un «juego de valores
Enfermera (entra en una habitación donde teórico» para con los pacientes y aplicar
hay una joven): «Buenos días, señorita». otro juego distinto para nuestras propias
Paciente: «Buenos días, señora». vidas. Se trata de no sentir y pensar una
Enfermera: «Soy Clementina, la enfer
cosa y decir otra distinta. O por lo menos,
mera que va a ocuparse de usted esta tarde.
Si tiene necesidad de alguna cosa no dude
ser capaces de aceptar las discrepancias,
en pedírmela». cuando las haya, pues pueden afectar a la
Paciente: «Muchísimas gracias, señora, relación con el paciente.
es usted muy amable… Yo no sé… [ella
dice esto, como quien se siente inquieto, Sugerencias sobre cómo expresar
intranquilo, preocupado…]. ¿Sabe?, me la autenticidad
gustaría decirle algo… ¿Usted sabe por qué Los profesionales deben tratar de:
estoy aquí?».
Enfermera: «No, lo cierto es que no, 1. Ser auténticos y, por tanto, deben bajar
pues acabo de tomar el servicio y todavía del pedestal y ponerse al mismo nivel que
mis colegas no me han dicho nada». los pacientes.
Paciente: «Pues… yo…, no sé cómo 2. No comunicar a los pacientes ninguna
decírselo, yo, yo estoy encinta, y para que respuesta que no esté acorde con los
mis padres no lo sepan he venido para des sentimientos («respeto tu decisión, pe-
hacerme de este embarazo». ro…», con esto en el fondo le estamos
Enfermera (la profesional no está de
acuerdo con el aborto por sus ideas reli
pidiendo o exigiendo que siga nuestras
giosas, y sin embargo le dice): «Ah, pues directrices).
me parece muy bien, si piensa que eso es 3. Estar abiertos a cualquier actitud del pa-
lo mejor para usted». ciente y no mantenernos a la defensiva,
aun cuando nos sintamos amenazados
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 101
emocionalmente con lo que el paciente abierto a todo lo que ocurra con el fin de que
nos está comunicando. el paciente pueda manifestar la esencia de
su ser, y así poder comunicar a este lo que el
Escala para medir el nivel profesional comprende de su problema.
de autenticidad del profesional
según R. Carkhuff Concreción
Nivel 1. Profesional nocivo: Consiste en tener la capacidad de ser concre-
Da respuestas estereotipadas. tos y específicos en lo que hablamos. Pedir
No se compromete con el paciente. al paciente que nos dé ejemplos de lo que
No tiene en cuenta el estado del paciente. dice o invitarlo a hablar en primera persona
No conoce lo que vive el paciente. facilitará que el contacto sea más personal
El paciente intenta revelar lo que le pasa y más comprometido. Cuando el paciente
y el profesional lo interrumpe continuamente. trata de precisar su pensamiento, emprende
Nivel 2. El profesional que no ayuda: un proceso de fina comprensión de lo que
El paciente puede manifestar sus preocu- vive y siente.
paciones o problemas, pero el profesional no La especificidad pone de relieve los pro-
quiere hablar de ello. blemas emocionales. El profesional puede
El profesional cambia su comportamiento inducir en el paciente esta actitud no solo
espontáneo por una rigidez excesiva o dema- preguntándole con precisión, sino también
siado «profesionalismo» artificial. hablándole de manera personal, clara y con-
Nivel 3. El profesional no hace mal al creta, y no empleando términos abstractos y
paciente cuando: expresiones anónimas.
Se compromete en la entrevista, escucha Por ejemplo:
pero no puntualiza.
Escucha pero no entra verdaderamente Paciente (una mujer que vive sola y lleva
en un proceso de relación, por miedo a que bastante mal la soledad): «[…] De todas
el paciente deje sus resistencias y se des- maneras, todo el mundo es muy egoísta…».
morone. P r o f e s i o n a l : « Yo n o c o m p r e n d o
Nivel 4. El profesional ayuda cuando: lo que usted quiere decirme cuando afirma
Abandona su comportamiento rígido con que todo el mundo es muy egoísta».
el paciente, mostrando una gran perspicacia
hacia sí mismo y una gran empatía hacia el En este caso, el profesional pide a la
paciente. paciente que especifique, a fin de ayudarle a
Permite al paciente hablar de lo que le precisar y a ser más concreta. Esta precisión
acontece y se compromete a ayudarle. y esta concreción permitirán al profesional
Nivel 5. El profesional ayuda aún más comprender que el verdadero problema de
cuando: esta señora es la soledad, que ella codifica
Se compromete totalmente; comunica mal poniendo la falta en que «todo el mundo
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de forma empática con el paciente y ha- es egoísta». Por tanto, ni codifica bien lo que
bla de cosas personales con este. vive, siente y pide, ni se responsabiliza de
Es consciente de la amplitud y la profun- que es ella la que tiene un problema: no sa
didad de su yo auténtico y anima al paciente ber qué hacer con su soledad.
a la revelación de él mismo, de sus preocu- La utilización de las generalizaciones, las
paciones o problemas. abstracciones y los términos imprecisos en
Para concluir el tema de la autenticidad, una situación problemática puede responder
podemos afirmar lo siguiente: el profesional a un mecanismo de defensa, a la necesidad de
no debe hacer la relación de ayuda, sino protegerse, tal vez por miedo o por no saber
vivirla. Es preciso que el profesional llegue enfrentar el conflicto real.
a establecer un encuentro existencial e inter- Se exagera la naturaleza del problema
personal entre un yo y un tú. No debe preten- y los datos son deformados hasta el punto
der interpretar, evaluar o juzgar; debe estar en que uno tiene la impresión de asistir a la
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102 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 103
presente, para que tome parte en el proceso profesional le ayuda a que si quiere verbalice
de su restablecimiento. Con huir hacia el lo que le pasa y lo que necesitaría.)
futuro, usted está dejando de vivir el presen Paciente: «Lloro porque he estado sin
te y, por tanto, de colaborar con nosotros, poder dormir en toda la noche, pensando en
ya que muchísimas veces ni se entera de lo que está sufriendo mi mujer al verme así y,
lo que le decimos. ¿Cómo se siente y vive además, por tener que ocuparse de los niños
su enfermedad en estos momentos?». y de la tienda, y encima es que no somos de
Paciente: «Mire, lo mejor es que lo de
aquí y no tenemos a nadie que nos ayude».
jemos, pues…».
Profesional: «Me dice que es mejor no Profesional: «Me dice que llora porque
hablar de esto, pues…». su mujer tiene que cargar con todo, los niños
Paciente: «Pues sí, es que tengo miedo y la tienda y no tienen a nadie [feedback].
y no sé cómo saldré de esta…». Intento ponerme en su lugar, y me imagino
lo duro que tiene que ser para usted verla así
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104 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
y no poder hacer nada o echarle una mano que el paciente ya había elaborado en su
[empatía]. Como no ha dormido dándole cabeza. De esta manera vemos cómo, si nos
vueltas a todo esto, me imagino que habrá centramos en el paciente y no en nosotros,
pensado en alguna solución. ¿Hay alguna las situaciones nos resultan más fáciles de
cosa que pueda hacer o nosotros podamos resolver y no nos quedamos «cortados» sin
hacer al respecto? [método de resolución de saber qué decir, o decir frases huecas del tipo:
problemas]». «No llore, ya verá como todo se arregla, tiene
Paciente: «Pues sí, he pensado que si pu- que animarse, etc., etc.». Recordemos que si
dieran darme el alta lo antes posible y seguir el paciente llora es por algo, y como no lo
el tratamiento o seguimiento en casa, me ha- sabemos, le podemos invitar a que, si quiere,
rían un gran favor, pues he oído que a veces nos lo diga. Si no quisiera decírnoslo, pues
nos podemos ir antes a casa porque hay una simplemente recogeríamos el mensaje, por
unidad móvil que puede pasar todos los días ejemplo de la manera siguiente:
por el domicilio y seguir así el tratamiento». Profesional: «Veo que está llorando y
Profesional: «Es decir, que usted me pro- me imagino que tiene sus motivos, y que es
pone seguir el tratamiento en casa mediante bueno llorar, si cree que puede hacer algo
un control que va a domicilio, ya que esto o nosotros podemos hacer algo al respecto,
cree que le ayudaría a su mujer, pues no ten- aquí me tiene [esperamos unos segundos en
dría que venir y si hay algún problema en silencio; si el paciente sigue en silencio, sin
la tienda le ayudaría a resolverlo y además decir nada, le podemos decir]: Mire, veo que
usted estaría cerca de los niños [feedback]». usted sigue llorando en silencio, sin decir
Paciente: «Eso es». o poder decir nada. Como le dije, solo dis-
Profesional: «Pues sí, podemos valorar pongo de cinco minutos, así que, sintiéndolo
esa posibilidad de que siga el tratamiento en mucho, cuando se pasen los cinco minutos le
casa con control, así que voy a ver cómo po- dejaré llorando, y volveré más tarde. Por al-
demos realizar esto lo antes posible. ¿Cómo guna razón no puede o no le parece oportuno
se siente después de haber hablado sobre el hablar, por tanto le dejaré, lo que sí le pido es
tema y hacernos esta proposición?». que piense qué puede hacer o podemos hacer
Paciente: «Pues muy bien, no sabe la ale- para solucionar esta situación que creo le está
gría que me ha dado, porque pensar que toda- generando a usted mucho sufrimiento».
vía tenía que estar aquí algunas semanas más Como vemos, el paciente es el centro
es que me hundía, me entraba una ansiedad y él es quien decide llorar y comunicar o
y depresión que veía que no iba a levantar no el motivo. Nosotros respetamos el que
cabeza. Muchísimas gracias, no sabe lo que nos lo diga o no, le hacemos un feedback e
me ha ayudado y la alegría que me ha dado». interpretamos en voz alta que llora porque
Profesional: «Pues me alegro mucho, de alguna manera está sufriendo, y es él
Pedro. Pero, como ve, es usted quien nos ha quien decide si comunicarlo o no o en qué
dado la solución a su problema o situación. momento desea comunicarlo, y le respeta-
Así que voy a preparar todo lo necesario para mos. El hecho de anunciarle al principio de
su traslado. Una vez más, muchas gracias la entrevista el tiempo de que disponemos,
por su colaboración y hasta luego». nos va a permitir que, una vez acabado el
Paciente: «Hasta luego y gracias». tiempo, nos vayamos aunque el paciente siga
Como acabamos de ver, un feedback al llorando o en silencio. Lo cual no quiere decir
mensaje no verbal (el llanto) manifestado que le dejemos y no volvamos, sino que más
con mucha comprensión o empatía y cen- tarde regresaremos y lo retomaremos donde
trándose en el paciente para que sea él quien lo habíamos dejado, diciéndole, por ejemplo:
proponga una solución para calmar su tris- «Hace una hora estuve aquí con usted durante
teza o llanto, le ha permitido fácilmente al cinco minutos, que es el tiempo de que dis-
profesional centrarse en el paciente. Muchas ponía; ahora puedo estar siete minutos. Me
veces perdemos el tiempo dando consejos o sentí triste por haberle dejado llorando, pero
consuelos inútiles y buscando una solución no podía estar más tiempo. Ahora he venido
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Capítulo | 5 Esquema de la comunicación 105
por si hay alguna cosa que usted quiera co- su decisión. Esto nos permite no agobiar
mentarme o algo que podamos hacer usted al paciente con preguntas y más preguntas
o yo para que se sienta mejor [realiza un sobre qué le pasa, y así nosotros, una vez
feedback y le muestra empatía]». que hemos dejado al paciente, poder centrar-
El paciente es quien va a decidir si quie- nos en los siguientes pacientes o tareas, sin
re comunicar algo o prefiere no hacerlo por angustiarnos porque el paciente ha decidido
alguna razón, y entonces, en este caso, es no decir nada.
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Capítulo 6
Obstáculos a la comunicación
o recepción del mensaje
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
DIRIGIR, MANDAR
Objetivos
• Conocer los principales obstáculos
Cuando una persona o paciente se comunica
que se suelen cometer en la con nosotros y nos expone algún problema o
comunicación con el paciente. preocupación y le contestamos dirigiendo
• Tomar conciencia de cómo o mandando lo que debe hacer en esa si-
los podemos evitar. tuación, le estamos dando a entender en la
comunicación que no estamos teniendo en
cuenta sus sentimientos, necesidades, deseos
o problemas; por tanto, obviamos la infor-
mación que el paciente quiere darnos. Por
Contenidos ejemplo, cuando le respondemos:
• Dirigir, mandar.
• Amonestar, amenazar.
• Moralizar, evaluar, culpar. «Tú lo que debes hacer es…», en lugar de:
• Aconsejar, dar soluciones inmediatas. «Veamos qué solución es la más adecuada»,
• Juzgar, criticar, interpretar, catalogar, o «Vamos a ver qué es lo que te preocupa
etiquetar. realmente».
• Simular que estamos de acuerdo,
alabar inoportunamente. Con estas respuestas estamos dicién-
• Insultar, ridiculizar, avergonzar. dole implícitamente a la otra persona que
• Tranquilizar, consolar, desviar el tema.
• Investigar, interrogar.
su comportamiento es inaceptable o que su
• Comparar con otras personas. inquietud no vale la pena, o que no creemos
en su capacidad para resolver sus problemas.
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108 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
manera puede recordarnos frases que ya nos Los efectos indeseables de tales mensajes
decían cuando éramos pequeños o adoles- llevan a poner al paciente en una situación
centes. molesta, pues si se somete al profesional
Si el profesional asume la responsabili- evitará sus reproches, pero se sentirá humi-
dad de la vida del paciente, no le ayuda, sino llado; y si se rebela y no acepta la propuesta,
que le perjudica, pues refuerza los sentimien- quedará sometido a las sanciones que le ha
tos de dependencia, pasividad, desvalimiento dicho.
o inferioridad, impidiéndole el desarrollo de En otras ocasiones, la persona puede
su iniciativa. adoptar una posición de resistencia activa
La otra persona (paciente) puede percibir como respuesta a dichas amenazas y pensar:
que no tenemos ninguna confianza en su ca-
pacidad y competencia para ver por sí misma
una solución a sus problemas. «Pese a todo, voy a hacer lo que yo crea
También nos podíamos preguntar si de- conveniente»
trás de estas actitudes de dirigir y mandar no
se oculta la necesidad de sentirnos necesarios como una forma de comprobar si estamos
y asegurarnos la necesidad que tenemos de dispuestos a mantener nuestras amenazas
que otros dependan de nosotros para así sen- hasta el final.
tirnos valorados. Los resultados que se obtienen bajo la
Por tanto, si en vez de dirigir, mandar, amenaza son siempre negativos, pues el in-
imponer lo que debe hacer, le preguntamos terlocutor se siente humillado y, a la larga,
cómo se siente y qué le ayudaría ante esta consciente o inconscientemente, va a boico-
situación, tendríamos un mejor resultado, tear, olvidar, etc., las medidas tomadas bajo
el paciente se sentiría más valorado y re- la amenaza.
forzaríamos su autoestima al comprobar En lugar de amonestar, amenazar, lo más
que él tiene recursos para hacer frente a la adecuado es, en primer lugar, cuando el in-
situación. terlocutor (paciente) nos comunica una situa-
ción en la que está actuando o comportándose
AMONESTAR, AMENAZAR de una determinada manera que a nosotros
(profesionales) nos parece que es inadecuada,
Cuando nos dirigimos hacia nuestro comu- en lugar de amonestarle o amenazarle dicién-
nicante en tono de amonestación o amenaza, dole que su proceder no está bien, debemos
podemos provocar en él los mismos efectos reflejarle, mediante un feedback, lo que nos
que el obstáculo anterior. Incluso agregamos ha dicho y clarificar cuál es su demanda al
con este las consecuencias que se derivarán: decírnoslo, pues si sabe que es para que le
amonestemos o reprochemos, seguro que no
«Si no haces lo que te digo, lo vas a pasar nos lo comunica.
muy mal», Por ejemplo, el paciente nos dice: «Esta
o se han derivado: mañana no me he tomado la medicación». Si
«Si ya te lo decía yo…», ante este mensaje del paciente le respondo:
de no tener en cuenta nuestro mandato. «Pues ya sabes lo que te va a pasar si no te
la tomas…», o: «Eres un irresponsable…»,
Con una actitud tan amenazante estamos lógicamente el paciente se va a sentir de
demostrando muy poco respeto hacia la li- alguna manera agredido. Si por el contrario
bertad de la otra persona. Podemos lograr le digo (teniendo en cuenta una buena comu-
incluso que se sienta temerosa y sometida a nicación: contenido, sentimiento, demanda,
nuestras exigencias. De alguna manera, se relación): «Me dices que no te has tomado la
busca el sometimiento de la otra persona; medicación [contenido], ¿cómo te sientes?
a veces se le llega a condicionar con frases [sentimiento] al decirme que no te has tomado
como: «Si no haces lo que te digo, entonces la medicación, ¿qué esperas de mí? [deman-
deberás atenerte a las consecuencias». da]», entonces el paciente me dirá por qué me
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Capítulo | 6 Obstáculos a la comunicación o recepción del mensaje 109
comunica esto y lo que espera de mí, y estoy mina la autoestima de la persona, volviéndola
por asegurar que la mayoría de las veces no insegura e indecisa; le produce sentimientos
espera una amenaza o amonestación. de que no vale e, incluso, de que es mala,
provocando también un cierto resentimiento
hacia las personas que los culpabilizaron.
MORALIZAR, EVALUAR, CULPAR La forma adecuada de comunicar, ante
Este tipo de comunicación «evaluativa-mora- estas situaciones en las que nuestra mane-
lizadora» logra provocar en las personas una ra de ver la realidad o nuestros valores no
actitud de «sentirse obligadas» a aquello que coinciden con los de nuestro interlocutor,
está en sintonía con nuestros dictámenes mo- puede ser:
ralistas, dependientes al fin y al cabo de nues- 1. Por una parte, tener en cuenta mediante
tro sistema de valores y no como algo que la empatía, el feedback y la demanda, por
salga de su interior, fruto de su conciencia. qué nos comunica esto y qué espera de
Actuar de esta forma es no tener en cuenta ni nosotros.
respetar su modo de percibir la realidad y los 2. Por otra parte, comunicarle, por ejemplo:
valores de nuestro interlocutor. Ante tantos «Mira, tú lo ves de esta manera, yo lo veo
de esta otra. ¿Quieres que dialoguemos
«deberías…», «tendrías que ser…» sobre esto?». Si su comportamiento me
ha provocado algún trastorno o malestar,
la persona responde resistiéndose y defen- podemos darle el «mensaje yo», del que
diendo su postura con mayor terquedad ante hablamos más adelante, por ejemplo:
nuestra actitud crítica. «Cuando no te tomas la medicación, me
Cuando nos comunicamos de esta for- siento preocupado, porque puedes tener
ma estamos transmitiendo al otro nuestra una recaída seria y esto te afectaría a ti y
desconfianza hacia su sistema de valores, a mí. ¿Qué crees que podemos hacer?».
ofreciéndole, eso sí, el nuestro como el más
correcto:
ACONSEJAR, DAR SOLUCIONES
INMEDIATAS
«Yo que tú lo haría…»,
o bien: Cuando nuestra actitud comunicativa es dar
«Desde luego, estás totalmente equivo- consejos o proporcionar soluciones inmedia-
cado, tu actitud es vergonzosa». tas a la problemática o las preocupaciones
de la otra persona, empujándola a que actúe
Todo ello provoca en las personas senti- teniendo en cuenta nuestro sistema de valores
mientos de culpabilidad, hace que se sientan y adoptando la solución que le ofrecemos,
incómodas y molestas, de que no están ha- demostramos una falta de confianza en que
ciendo las cosas como dicta la sociedad, de ser esa persona pueda resolver por sí misma sus
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propios problemas:
«la oveja negra». Es decir: «No deberías
decir o hacer cosas que te avergüencen y «Lo más sensato en esos momentos es que
que nos dejen en mal lugar»; «Mira, las sigas mis consejos…»,
cosas son así y no hay que darles vueltas»; en lugar de decirle: «¿Qué crees que te
«Realmente tú tienes la culpa de todo lo ayudaría en esta situación y en qué medida
que pasa». crees que yo puedo ayudarte?».
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110 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
hacia personas de «prestigio» que le den la por nuestra actitud. Y si esto se repite con
respuesta apropiada a cada problema sus- cierta frecuencia, creamos en la persona un
citado, a manera de recetario. sentimiento de inutilidad, de no valer para
Cuando actuamos como consejeros «afi- nada, de no hacer las cosas bien, de dudar a
cionados» estamos dando a entender una ex- la hora de hablar, de proponer o de pregun-
presión de superioridad. tar algo, y de que nunca será aceptado tal
y como él es. Esto lleva a un bloqueo en la
comunicación.
«Yo sé lo que más te conviene; cuando
tengas un problema, acude a mí y te lo Cuando respondemos a nuestro interlo-
resolveré.» cutor interpretando lo que dice, buscando
una explicación que para nosotros puede ser
Esto provoca una especial irritación y esencial, se corre el peligro de deformar el
animadversión en las personas que tienden pensamiento o los sentimientos de nuestro
a ser independientes en sus valores y com- interlocutor y deteriorar su imagen, así como
portamientos. herir su dignidad.
En ocasiones, nuestros «consejos o solu-
ciones» hacen pensar a las personas que no las «No dices más que tonterías», o «Te com-
hemos comprendido en absoluto, porque la portas como un niño». «No sé si te has dado
«receta» que les hemos ofrecido no tiene nin- cuenta, que hasta un niño sabe eso», «No
sé cómo no sabes una cosa tan sencilla…».
guna viabilidad en su caso; esto puede llevar
a que el paciente sienta que nos importa más
su problema que él como persona. Por otra Cuando con frecuencia juzgamos a una
parte, al dar un consejo al paciente sin que nos persona, podemos provocar en ella un re-
lo pida, este puede tener la sensación de que traimiento en la expresión de sus sentimien-
queremos liberarnos de él lo antes posible, tos, de ahí que busquen a personas que sean
poniéndole recetas rápidas a su ansiedad. menos críticas y más comprensivas hacia su
También esta actitud muestra, por parte comportamiento.
del profesional, una falta de confianza en el De tal forma influyen las críticas en las
paciente para abordar y resolver sus proble- personas que no es de extrañar que acaben
mas, pues se los damos ya resueltos. ocultándonos, no solo sus sentimientos, sino
Todo esto puede causar, en algunos pa- también sus inquietudes y problemas.
cientes, sentimientos de irritación o inco- Con estas actitudes el paciente se siente
modidad por sentirse tratados como niños, rebajado, humillado, inferior: «Tienes menos
sin ningún respeto ni valor por su capacidad cerebro que un mosquito…». Etiquetas como
hacia la propia autonomía. esta llevan al paciente o interlocutor a ce-
Por tanto, entre las respuestas más ade- rrarse a la comunicación.
cuadas con el fin de no caer en este obstáculo La persona se siente catalogada cuando le
tendríamos: por una parte, partiendo de él, ponemos una etiqueta: «Eres un paranoico»,
antes de aconsejarle o darle soluciones, pre- «Eres un fracasado…», incluso debemos ser
guntarle: «¿A qué crees que se debe el pro- muy prudentes con ciertos diagnósticos que
blema o la situación que tienes…?», y: «¿Qué estigmatizan a la persona a veces de por vida.
crees que podías hacer, o qué has hecho hasta Etiquetar a la persona es negarle el derecho
ahora o has pensado que te ayudaría?». a ser ella, a poder ver las cosas como ella
las ve.
Todo esto puede llevar al interlocutor o
JUZGAR, CRITICAR, INTERPRETAR, paciente a tener hacia el profesional ciertos
sentimientos de: resentimiento, pues se siente
CATALOGAR, ETIQUETAR
humillado; desconfianza, pues tiene la sen-
Con frecuencia adoptamos el papel de jueces sación de que se le está encasillando en una
críticos ante otras personas, con lo que logra- categoría de personas; «oposición» al profe-
mos que se sientan acobardadas y asediadas sional o receptor, pues no está de acuerdo en
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Capítulo | 6 Obstáculos a la comunicación o recepción del mensaje 111
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112 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
Practicamos este obstáculo cuando ha- Cuando enviamos a una persona mensa-
blamos de la persona como: «… es muy in- jes tales como:
teligente, ejemplar, modelo…», lo cual puede
provocar sentimientos molestos en las otras
personas que la rodean o escuchan. «No debes tener tanto genio» o «Poco vas
Las alabanzas pueden provocar en nues- a lograr con esa forma de ser»
tro interlocutor que oculte sus capacidades
positivas para que así no se las saquen en con la intención de lograr en dicha persona
público y se sienta en una situación emba- un cambio significativo en su conducta, lejos
razosa; o bien, pueden llevarle a una cierta de conseguirlo, se afianzará mucho más en
dependencia de ellas. su forma de ser o, en todo caso, se le hace
Recibir mensajes de este tipo, sabiendo sentir inútil, incomprendido, despreciado.
que son una forma de manipulación para Obviamente, estos mensajes provocan que
conseguir ciertos fines, lleva al interlocutor la comunicación se interrumpa o no se dé, o
a sentirse todavía más incómodo, pues se da que sea muy superficial por temor a que no
cuenta de la falta de autenticidad. se respete la propia intimidad.
En definitiva, no caeremos en este obs- La persona que se siente insultada se
táculo si claramente le expresamos al inter- sentirá herida, despreciada, ridícula, y en el
locutor que lo que le decimos es porque lo futuro tenderá a reprimir sus sentimientos y
conocemos y lo sentimos así, que no hay a silenciar sus opiniones para evitar humi-
ninguna otra idea o manipulación detrás, pero llaciones posteriores.
que si le molesta no lo decimos. Tengamos en cuenta que, aunque no
pretendamos herir cuando insultamos o ri-
diculizamos, sin embargo el amor propio,
INSULTAR, RIDICULIZAR, máxime si hay personas delante, se siente
AVERGONZAR herido y humillado.
La forma correcta de comunicar para
Estos tres tipos de mensajes forman parte,
no caer en este obstáculo sería, en primer
quizá con excesiva frecuencia, de nuestra
lugar, pedirle una explicación por haber rea
comunicación cotidiana con las personas,
lizado tal cosa, que es lo que procede, y
máxime cuando hay confianza, como en las
en segundo lugar, podríamos decirle: «No
familias. Cuando insultamos, ridiculizamos
acabo de entender por qué me respondes
o tratamos de avergonzar a alguien, logramos
ridiculizándome o insultándome; ¿cómo te
—aunque lo hagamos en tono jocoso— un
sentirías tú si yo hiciera lo mismo ante algún
efecto devastador en la imagen que esa per-
mensaje o algo que tú has hecho o dicho?»;
sona quiere que se tenga de ella:
«¿Te gustaría que yo te avergonzara cuando
haces algo que a mí me parece que no está
«Cada vez que abres la boca es para decir bien?».
tonterías.»
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Capítulo | 6 Obstáculos a la comunicación o recepción del mensaje 113
Con esta actitud —aunque no pretende- 4. Presentarle casos de otras personas que
mos que así sea— logramos que la persona están peor que él: «Peor es lo que le ha
piense que no es comprendida en sus senti- pasado a […], que se ha quedado tetra-
mientos y actitudes, y lo suele expresar en pléjico».
frases como: 5. Desviar el tema: el profesional no sabe
qué decir o qué hacer ante lo que le están
«Si tú estuvieras en mi pellejo, veríamos lo diciendo, o le resulta amenazante verle
que harías.» llorar, y en vez de ayudarle a sacar esos
sentimientos, desvía el tema acudiendo a
A ninguna persona le gusta que le digan conversaciones más alegres: «No pienses
que lo que está sintiendo en una circunstancia en cosas tristes, hablemos de cosas más
es desproporcionado con lo que debería sentir alegres».
en realidad. Estamos mostrando, sin más, 6. Echar la culpa a otro(s): se intenta tran-
una falta de tacto, de respeto, de empatía, e quilizar al paciente echando la culpa a un
incluso un rechazo hacia esa persona. tercero, con el fin de que aparezca como
Distraer a una persona de sus sentimien- víctima de otra persona o de las circuns-
tos del momento puede parecer útil en ese tancias: «Desde luego, no hay derecho a
instante, pero hay sentimientos lo suficiente- que esa persona sea así».
mente gravosos para la persona que vuelven a Lógicamente, el paciente que recibe estos
aflorar si no han sido abordados con suficien- mensajes de consuelo o tranquilidad se siente
te seriedad. Los sentimientos problemáticos tratado como un niño al que se le tiene que
no se resuelven por dejarlos a un lado o darles decir lo que tiene o no importancia, y al
largas. que se le niega el derecho a sentir lo que sien-
Toda persona desea ser escuchada y te. Por otra parte, más de una vez piensa en
comprendida con respeto cuando tiene un su interior que es fácil «dar consejos cuando
problema; si a cambio le salimos «echando a uno no le duele».
balones fuera» como:
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114 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
incluso, como tiene que responder a nuestras Le damos a entender que, si quiere ser
preguntas, ni siquiera puede decir lo que le aceptado, querido o valorado, tendrá que
pasa, ya que las preguntas condicionan las ser como otras personas, porque él, por sí
respuestas; además, a veces no verificamos mismo, no vale. Él lo vivencia del siguiente
las respuestas para ver si le hemos compren- modo:
dido como él quiere, y por tanto, podemos
desviarnos del problema real.
«Yo soy despreciable y sin valor; si quiero
Una persona no necesita un interrogatorio que me soporten, tendré que imitar a…».
cuando tiene un problema, sino una actitud
receptiva por nuestra parte. Interrogar a otra
La comparación suele expresarse de muy
persona, además, limita enormemente su
variadas formas; por ejemplo:
libertad para hablarnos de lo que le aturde y
preocupa, puesto que estamos condicionan-
do con nuestras preguntas sus respuestas, «Mira qué bueno es fulano»; «Fíjate en
y seguro que podemos acabar en una des- lo que ha hecho mengano»; «Tú eres el
viación del tema, o bien en ilustrar sobre lo más…»; «Tú eres el menos…».
que nos interesa a nosotros y no sobre lo que
le preocupa realmente a la otra persona. En otras ocasiones, el término de la com-
Como resultado de tanto interrogatorio, paración se establece con el propio emisor,
nuestras interpretaciones suelen ser equivoca- que se pone como modelo:
das porque no hemos sabido escuchar. Nues-
tras interpretaciones de las actitudes y las
conductas de los demás suelen reflejar bas- «Yo ya habría terminado…»; «Si yo hubiera
tantes proyecciones. Convendría no olvidar tenido lo que tú…»; «Yo a tu edad…».
la coincidencia que con este obstáculo tiene
el refranero español: «Piensa el ladrón…». Otras veces se practica este obstáculo
Recordemos que para el profesional está ante otro paciente de forma más sutil:
«generalmente» claro por qué hace las pre-
guntas que hace, pero el paciente las puede
interpretar según su estado de ánimo y a «Qué buen paciente es Pedro, con él da
veces pensar que está peor de lo que está, o gusto.»
quedarse con la preocupación de si respondió
bien o mal al profesional. Otras veces puede En ocasiones se le cataloga:
ver en las preguntas una forma de invadir
su intimidad, provocándole una sensación
de malestar que a lo mejor le puede llevar a «Tú tienes el mismo carácter insoportable
mentir o a replegarse en sí mismo, pues no que tu madre.»
está dispuesto a levantar sus defensas.
Asimismo, el profesional puede caer en Todos estos mensajes bombardearán la
el error de dedicarse a hacer interpretaciones seguridad de la otra persona y la harán más
en vez de clarificaciones y, por tanto, seguir insegura, dependiente de la opinión de los
forzando al paciente con preguntas, para así otros. En el fondo, se persigue que haya un
poder confirmar su interpretación, llegando cambio en esa persona, pero el resultado
incluso a distorsionar la realidad. suele ser muy diferente, pues la persona
se siente rebajada, humillada, etc., y busca
ansiosamente la opinión de los demás. Otras
COMPARAR CON OTRAS PERSONAS
veces, la persona intenta imitar al individuo
Mediante estos mensajes se le niega a la con el que se le compara y, al no conseguirlo,
otra persona el derecho a tener su propia se siente frustrada y agresiva, dando como re-
personalidad. Se le niega el carácter único e sultado que se comporte tratando de hacerlo
irrepetible de su yo. todavía peor.
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Capítulo 7
La comunicación en situaciones
de conflicto
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
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116 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 7 La comunicación en situaciones de conflicto 117
este debe seleccionar una clave adecuada para está viviendo el profesional. Se refiere más
expresarlo, de manera que el enfermo no se al comportamiento del enfermo que al senti
sienta herido y comprenda y cambie de actitud. miento y la situación del profesional (fig. 7-1).
El profesional, tiene mucho trabajo --- y Este mensaje es descifrado por el enfer
--- Codifica --- mo como una evaluación sobre sí mismo.
FIGURA 7-1
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118 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
FIGURA 7-2
Los «Mensajes Tú» (tú eres un pesado) son Veamos el ejemplo del paciente que toca
claves muy pobres de comunicación acerca muchas veces el timbre y la enfermera se
de lo que siente el profesional, pues lo más siente molesta por esto. Generalmente se sue
frecuente será que el paciente se sienta humi le decir: «Mira que es pesado este paciente,
llado o culpabilizado con el mensaje dado ¿cuántas veces me va a llamar?». De esta
por el profesional. Muy distintos son los forma, la enfermera le culpabiliza y no se
«Mensajes Yo» (fig. 7-2). da cuenta de que el problema lo tiene ella.
Los «Mensajes Yo», partiendo de un buen Una forma adecuada de comunicar el pro
proceso de comunicación, son más eficaces blema que tiene la enfermera sería:
para influir en los pacientes, ya que expresan 1. Hay que reflejarle al paciente de manera
cómo nos sentimos ante su requerimiento, o concreta el comportamiento que yo con
bien ante un comportamiento que para noso sidero inaceptable porque me crea males
tros resulta molesto o inaceptable. tar y perturbación. Gordon, con el fin de
Generalmente no se nos ha educado para facilitarnos la manera de comunicar esto,
manifestar sentimientos, sino solo conteni nos propone la fórmula:
dos. Aún más, culpabilizamos al otro de lo
que a nosotros nos pasa, haciendo que los «Cuando Me siento Porque
otros se sientan molestos, incómodos, etc., Le pidoque »
cuando el problema es nuestro.
En cierto sentido, el «Mensaje Yo» es F órmula: Cuando… (describo la
una solicitud de ayuda para que el paciente situación, esto corresponde al contenido
cambie de conducta o requerimiento, ya que del que hablábamos al exponer cómo de
está causando tal sentimiento en nosotros los be emitir el emisor) «usted llama muchas
profesionales. veces…». Como vemos, describimos la
Los «Mensajes Yo», al contrario de situación sin ningún juicio de valor.
los «Mensajes Tú», tienen muchas menos 2. Hay que reflejarle el sentimiento que en
posibilidades de provocar en los pacientes mí produce en este momento tal compor
una autoevaluación negativa, culpabilidad, tamiento.
resistencia, rebelión, etc. En general, los F órmula: Me siento… «molesto,
«Mensajes Yo» evitan todo aquello que se inquieto, airado…» (es decir, escoger el
deriva del uso de los obstáculos o las barreras sentimiento que más se acomode a nues
a la comunicación (expuestas anteriormente), tro estado y manifestárselo).
pues estos son «Mensajes Tú». 3. Se trata de describir el efecto claro y
concreto que tiene sobre mí dicho com
Pasos esenciales de los «Mensajes Yo». portamiento. Es decir, las consecuencias
Es decir: cómo comunicarme cuando que tiene para mí como profesional, no
para el paciente, ese comportamiento
soy yo quien tiene el problema
inaceptable del paciente.
Vamos a desarrollar esto de forma que lo Fórmula: porque… «tengo mucho tra
podamos comprender. bajo y no puedo realizar lo que me pides».
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Capítulo | 7 La comunicación en situaciones de conflicto 119
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120 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 7 La comunicación en situaciones de conflicto 121
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122 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
Paciente: «No creo que sea para tanto». Este método, en un principio, no es nada
Enfermero: «Bueno, de todas formas…». nuevo para nadie, porque lo usamos con bas
Paciente: «Bien, me es igual, ya sabe tante frecuencia cuando la relación para las
que detesto los medicamentos».
personas no es conflictiva. La pena es que no
Enfermero: «Pero sabe usted que es
importante, porque más vale prevenir que
lo usamos cuando existe el conflicto.
curar». A veces lo usan los cónyuges para ver
«Paciente: Por favor, no insista, no quie dónde van a ir el fin de semana, o qué va
ro tomarla». caciones van a hacer, o cómo educar a los
Enfermero: «Bueno, pues haga lo que hijos, etc. También en las negociaciones sin
quiera; es su vida la que está en peligro, dicales se habla de concertación. Por tanto,
no la mía». la concertación no es la democracia, en la
democracia unos ganan y otros pierden. Aquí
En este diálogo también observamos, se trata de que ambos ganan y todos ceden en
como en el anterior, que la escucha activa algo, por tanto, nadie pierde.
brilla por su ausencia. El «método nadie pierde» requiere que
Veamos los efectos que provoca esta cuando una persona tiene más poder que la
forma de comunicación: otra, se comprometa a «no» usarlo. En vez
de emplearlo, la actitud de esa persona debe
Efectos del uso del método II: ser: «Tú y yo tenemos un conflicto de nece
tú ganas yo pierdo sidades. Yo respeto tus necesidades, pero tú
1. El que una persona se vea privada de también debes respetar las mías. No voy a
sus puntos de vista o de tener razón en usar mi poder sobre ti de manera que yo gane
favor de las necesidades de otra, nunca y tú pierdas; pero no puedo ceder y dejar que
se considera justo. tú ganes a cambio de que yo pierda. Así es
2. Se da un resentimiento y enfado hacia que pongámonos de acuerdo para encontrar
las relaciones, y especialmente con la una solución que satisfaga tus necesidades
persona que gana. y las mías de manera que ninguno pierda».
3. En los hospitales en los que los profesio Lógicamente, este método intenta inte
nales son permisivos, salen perdiendo, grar lo que hemos dicho sobre las formas de
pues los pacientes se vuelven desconsi comunicar: yo tengo el problema; tú tienes el
derados, egoístas, faltos de cooperación y problema, es decir, los «Mensajes Yo» y las
con frecuencia totalmente ingobernables, actitudes de la escucha activa.
incluso agresivos contra los profesio Por ejemplo:
nales.
4. A largo plazo, es autodestructivo para la
Enfermero: «Buenos días, señor Sánchez».
persona que está siempre perdiendo, pues Paciente: «Buenos días».
termina quemándose en la relación. Enfermero: «Parece ser que hoy no se ha
En definitiva, el uso del poder en los méto tomado la medicación».
Paciente: «No la necesito».
dos I y II daña tanto a quien lo usa como a
Enfermero: «Sabe que tiene la presión
aquellos sobre quienes se usa. arterial alta y me preocupa que le pueda
pasar algo. Eso le afectaría a usted y a noso
Método III. Método del consenso tros [utiliza el «Mensaje Yo»: yo tengo un
o concertación: nadie pierde problema, y es que si no se toma la medica
ción y le pasa algo, yo soy el responsable]».
Consenso entre dos personas (tú y yo) Paciente: «No creo que sea para tanto».
Enfermero: «Parece ser que no quiere
Constituye la alternativa a los «métodos tomar la pastilla».
gana-pierde» para la resolución de conflictos. Paciente: «Así es, detesto los medica
Es un método que produce soluciones que mentos».
traen la «satisfacción mutua de las necesi Enfermero: «¿Realmente detesta los
dades». medicamentos? [escucha activa, feedback,
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Capítulo | 7 La comunicación en situaciones de conflicto 123
puede ser la familia, o en una unidad de tra b. Las ideas se exponen de forma rápida,
bajo. Lógicamente, no se puede emplear con espontánea, poco reflexiva.
grandes grupos o masas, por eso se utiliza la c. Aceptar todas las ideas como posibles
democracia como el método menos malo, soluciones.
pero en la democracia ya se sabe que hay d. Lo más importante es no evaluar,
ganadores y perdedores. juzgar o menospreciar ninguna de las
soluciones que se están ofreciendo.
Pasos que deben realizarse
e. Si la(s) otra(s) persona(s) no ofrece(n)
en el método «nadie pierde» (entre ninguna solución, aliéntela(s) a con
varias personas o pequeños grupos) tribuir. Todos deben contribuir, nadie
Se requieren seis pasos en el proceso de re debe quedarse excluido. Así todos se
solución de problemas cuando ambos tienen sentirán corresponsables en la bús
el problema. queda y las soluciones al problema.
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124 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 7 La comunicación en situaciones de conflicto 125
método «nadie pierde» con la permi niñez, en que precisamente esas eran
sividad (sobre todo en las relaciones las reacciones de los adultos cuando los
profesionales-pacientes o padres-hijos). niños no cumplían con lo convenido.
El método III es un compromiso de todos
para con todos. El uso del poder para obligar al cumplimien
2. La falta de tiempo es otro de los pro to, o del castigo por el incumplimiento de
blemas. No tiene nada de asombroso una decisión en «nadie pierde», tendrá las
que tengamos problemas para encontrar mismas consecuencias (mecanismos de en
tiempo para una sesión de resolución de frentamiento y relaciones dañadas) que el uso
conflictos. La mayoría de las personas del poder al tomar la decisión.
prefieren evitar el abordaje de un conflic Los métodos alternativos al método del
to. Es mucho más cómodo y sencillo ver poder tendrán menos riesgo de dañar y serán
la televisión, leer el periódico, posponer más efectivos.
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126 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo 8
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128 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 129
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130 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
identificar la causa de su ansiedad; esta sería debido al cansancio. Así que le pido que us-
la primera etapa del proceso necesario para ted me ayude a atenderlo lo mejor posible.
superarla. La ansiedad no es siempre el único Porque me imagino que cuando usted está
cansado también le cuesta concentrarse,
sentimiento que el profesional experimenta
¿verdad…?».
durante la fase de acogida. Puede también Paciente: «¡Ya lo creo!, incluso a veces
sentir aburrimiento, irritación, indiferencia, se me pone un mal humor que no hay quien
descorazonamiento, etc. Si no nos paramos me aguante…».
y tomamos conciencia de tales sentimientos, Profesional: «De acuerdo, gracias por su
estos van a influirnos en la relación con el comprensión y ayuda…».
paciente. De la misma manera que hemos
dicho respecto a la ansiedad, conviene iden-
tificar la causa de estos sentimientos. Es
aceptando la emotividad y los sentimientos, CÓMO PERCIBO AL PACIENTE
viviendo con ellos sin lamentos, como uno CON EL QUE ME VOY
llega a controlarlos mejor. Y esto por dos
A RELACIONAR
razones principales:
1. Las manifestaciones más intempestivas, En el primer encuentro con el paciente se
las que más agotan nuestra emotividad, da, por parte del profesional y el paciente,
se deben, de hecho, a la negación que el fenómeno de simpatía-antipatía, con el
nosotros intentamos oponer. peligro de que se pervierta la relación tera-
2. Es preciso rechazar, además, la idea de péutica, ya que con frecuencia van a aparecer
que la emotividad es en sí misma un lo que en psicoanálisis se denomina la trans-
defecto. No es una debilidad. Puede ser ferencia. Es decir, proyectamos sobre nues-
una riqueza considerable si se acepta y tro interlocutor ciertos aspectos de simpatía,
canaliza adecuadamente. antipatía o indiferencia. Así, por ejemplo, el
paciente que percibe al profesional como frío
Percibir y observar a las personas y a las o distante, le muestra antipatía. Ante esta,
cosas sin prejuicios, teniendo en cuenta su si el profesional no toma conciencia, puede
individualidad, es la mejor escuela de objeti- reaccionar con una contratransferencia, es
vidad y estabilidad. Tal actitud puede ser una decir, con sentimientos muchas veces de
pauta de gran seguridad en los casos difíciles. frustración, por no poder resolver su pro-
Es el mejor medio para mantenerse sereno. blema de salud, o de forma seca, cortante,
También el profesional puede, por ejem- recetándole sin apenas escucharle, etc. Por
plo, estar cansado; si este toma conciencia esta razón, es conveniente que durante los
de su cansancio, tal vez puede sobreponer- primeros momentos de la relación «pasee su
se al mismo, o bien, si esto no es posible, imagen por mi cabeza» con el fin de tomar
comunicárselo al paciente con el fin de que conciencia de qué siento ante su presencia y
pueda comprender su cansancio y no inter- por qué. Esto me permitirá poder tomar una
prete que el profesional no quiere escucharle cierta distancia y sentirme lo menos condi-
o que pasa de él. cionado por los fenómenos transferenciales.
Por ejemplo: Con frecuencia, al tomar conciencia de
esto, nos damos cuenta de que no nos relacio-
namos con la persona que tenemos delante,
Profesional: «Buenos días, señor Juan». sino con la imagen que nos hemos hecho de
Paciente: «Hola, buenos días». ella. Esto está condicionado por la imagen
Profesional: «Mire, voy a atenderle du-
que inconscientemente nos hacemos al ver su
rante quince minutos, como de costumbre;
sin embargo, me va a perdonar que debido cara, ropa, oler su perfume, etc. Si la imagen
a la mañana tan agotadora de trabajo que que nos viene es positiva, agradable, simpá-
he tenido, me siento muy cansado; por tan- tica, entonces solemos acoger al paciente o
to, si hay algo que le digo que me repita, o familiar de forma amable, sonriente. Por el
ve algún gesto como de falta de atención, es contrario, si la imagen de la persona con la
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 131
que nos vamos a relacionar nos es antipática, Este punto quedará ampliamente ex-
fría, distante, etc., en este caso la solemos puesto al hablar de la primera fase de la
acoger con frialdad, distancia, sequedad, relación de ayuda; sin embargo, vamos a
incluso estamos menos tiempo con ella, o señalar algunos puntos que nos parecen
terminamos antes la «entrevista». importantes.
Si nos preguntaran por qué alguien nos En primer lugar, siempre que vayamos
cae simpático(a) o antipático(a), seguro que a entrar en relación con el paciente o con
muchas veces nuestras respuestas serían: cualquier persona, y esto no solo por primera
«Es que me cae bien», «Es que es muy vez, sino cada vez, debemos preguntarnos:
simpático(a)», «Es que es muy agradable», ¿cómo me gustaría a mí que me acogiera el
o bien lo contrario, cuando en el fondo lo profesional, mi pareja, mi padre, mi amigo,
acabamos de conocer y no tenemos ele- etc.? Hacernos esta pregunta nos permitirá
mentos suficientes como para hacer este tomar conciencia de que, según sea nuestra
juicio. Por tanto, seamos conscientes de es- acogida, se dará o no la relación.
te fenómeno pues, condicionados por este, A veces nos quejamos de que el paciente
es posible que la comunicación se dé o no no se abre o no se comunica con nosotros,
se dé, o bien que se dé de forma sesgada o pero ¿nos hemos parado a tomar concien-
condicionada por estos sentimientos de sim- cia de cómo he acogido al paciente?, ¿me
patía, antipatía o indiferencia. Pensamos que he presentado por mi nombre y profesión?
es principalmente el profesional quien tiene Mi actitud no verbal ¿ha sido de cercanía,
que establecer una buena relación-entrevista frialdad, seca, distante?
terapéutica y asumirla con responsabilidad ¿Cómo acojo las actitudes negativas con
y no atribuir al paciente las deficiencias que las que puede llegar el paciente? Por ejemplo,
puedan surgir. Como nos dice Hernández veamos algunas de ellas:
Guerrero (2010): «La eficacia terapéutica de
los tratamientos depende, en cierta medida, 1. El paciente llega ansioso. Generalmente
del trato que el profesional de la medicina él no lo dice, nosotros lo deducimos por
dispensa al paciente». Asimismo, Pascual e su comportamiento no verbal. Como
Indurain (2001) nos vienen a decir que cuan- esto no lo sé de manera concreta, para
do el profesional es un buen comunicador, no interpretar, lo mejor es decirle, por
los pacientes quedan satisfechos en un 90%, ejemplo: «Tengo la impresión de que
lo cual pensamos que es vital para el cum- está ansioso. Si es así, ¿quiere decirme
plimiento del tratamiento. a qué se debe y qué le ayudaría para
sentirse mejor?». Esto ayudará al pa-
CÓMO LO ACOJO ciente a expresar cómo se siente, y a
nosotros, a saber de manera concreta lo
Si le preguntáramos al paciente qué espera de que le ayudaría para sentirse mejor y, por
los profesionales de la salud, sin duda que, consiguiente, mejor acogido.
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132 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 133
en adelante para que esto no me pase»). Re- que hay que tratarle como a una perso-
cordemos que en este caso soy yo quien tiene na y no como a una cosa. Explique al
el problema, que el otro me lo ha creado, pero paciente todo lo que le va a hacer (si
soy yo el que lo tiene, por tanto recordad lo va a ser doloroso o afectar su pudor,
que en el capítulo 7 decíamos sobre cómo el consentimiento informado, que estén
comunicar cuando soy yo quien tiene el pro- presentes o no otras personas, el se-
blema. creto profesional, clarificar cualquier
Así pues, ante cualquier comportamien- duda, inquietud o lenguaje no verbal y
to (apatía, indiferencia, silencio, cansancio, verbal, con el fin de que el paciente no se
ansiedad, agresividad…) con el que llega el quede con interpretaciones erróneas…).
paciente, debemos reflejarle cómo lo vemos
(tengo la impresión de que está ansioso, apá-
tico…), decirle o preguntarle a qué se debe y DURANTE LA RELACIÓN
qué le ayudaría a sentirse mejor. Esto es, en CON EL PACIENTE
definitiva, practicar el «método de resolución Los tres puntos siguientes se establecen casi
de problemas» del que hemos insinuado algo al mismo tiempo; sin embargo, para una
y hablaremos más adelante. mejor comprensión, vamos a abordarlos
Resumiendo: para una buena acogida, separadamente.
es preciso:
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134 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 135
a qué cree que se debe según él, y qué le al paciente durante los 10 minutos fijados,
ayudaría; por ejemplo, decirle si le ayu- mientras que si está más tiempo y ha de hacer
daría que estuviera presente su familia, otras cosas u ocuparse de otros pacientes, se
etc. mostrará nervioso, inquieto, a veces agresivo,
• Asimismo, responder a las expectativas preocupado porque el tiempo previsto se ha
del paciente que desea ser informado pasado, con lo cual difícilmente podrá es-
sobre su enfermedad y verificar que cuchar al paciente.
comprenda la información que se le da Por otra parte, si el profesional no fija el
y los cambios que se le proponen, pues tiempo con el paciente, quizás no sepa cómo
sabemos que cuando falta información acabar (cortar, pues se alarga demasiado)
(además de crear un estado de ansiedad cuando el paciente le está hablando de sus
o angustia en el paciente), los cambios o preocupaciones o problemas. Si no ha fijado
son más lentos, o son incorrectos, o no se el tiempo también puede ocurrir que, cuan-
producen. do quiera terminar la entrevista, el paciente
• El paciente tiene derecho a una informa- comience a hablar de algo que le preocupa
ción clara y adaptada a su comprensión mucho, o incluso llore. Si el profesional se
sobre su estado de salud y enferme- va con el pretexto de que tiene que atender
dad, sobre el diagnóstico, tratamiento, otros asuntos, el paciente puede pensar que
pronóstico y la evolución de la terapia. su problema no le interesa, que el profesional
En todo esto no olvidemos de partir de no quiere escucharle, que tal vez su situación
hasta dónde el paciente quiere o no saber, es demasiado grave como para que se ocupen
para ir dosificándolo según sus necesida- de él, o que no merece la pena, etc. En tal
des o momentos oportunos. situación, el profesional puede sentirse como
en un callejón sin salida, entre la necesidad
de irse, porque tiene otras cosas que hacer,
FIJAR CON EL PACIENTE y la de escuchar al paciente en esta situación
EL TIEMPO QUE VA A DURAR angustiante, porque, ¿cómo va a abandonar
LA ENTREVISTA ahora al paciente? En este caso, si el profesio-
nal se queda, se sentirá nervioso, inquieto, lo
Al comienzo de la entrevista o relación, con- cual impedirá una plena disponibilidad para
viene clarificar con el paciente el tiempo es- escuchar adecuadamente.
timado de la misma. Esto permite que ambos Por el contrario, si el profesional ha
se centren en lo importante y no se les vaya anunciado previamente al paciente que el
el tiempo en aspectos menos importantes. tiempo que pasará con él es de 10 minutos, en
Por ejemplo: ese tiempo el paciente puede contarle lo que
desee y cuando lo desee. El paciente puede
Profesional: «Verá, el tiempo que dispongo tener sus razones para decir las cosas impor-
ahora para usted es de diez minutos. Tal vez tantes en el último momento, puede tener sus
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
sea poco, pero es el que ahora dispongo. Si motivos para decir, por ejemplo, que es al
necesita más, ya lo vamos planificando en final cuando comienza a tener confianza en el
otras entrevistas; esto es importante para profesional, o que dice las cosas más proble-
centrarnos en lo que a usted le preocupa y máticas en el último momento, para así poder
ambos vemos como más prioritario». liberarse de ellas y que el profesional se vaya
con ellas y no se le dé más vueltas, etc.
Si el profesional quiere mantener con el Por tanto, el profesional podrá dejar al
paciente 10 minutos de entrevista, deberá paciente, con toda tranquilidad, aunque este
respetarse ese tiempo, ni más ni menos. Eso le esté contando cosas importantes o tristes,
facilita que se pongan límites al paciente y al porque él ya le había anunciado el tiempo
profesional (no olvidemos que el tiempo es que iba a durar la entrevista. No obstante,
estructurante para ambos). De esta manera, el profesional le podrá decir: «Me está di-
el profesional estará dispuesto a escuchar ciendo cosas muy importantes, siento tener
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136 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
que irme, ya que le había dicho que solo sufrimiento, no son algo ajeno a él o debido
disponía de 10 minutos; si me quedara más meramente a circunstancias ambientales
tiempo, no estaría disponible para poder es- externas, sino que debe analizar su grado
cucharle y esto requiere tiempo. Por tanto, de responsabilidad en el problema, su con-
si lo desea, yo volveré a tal hora o seguimos trol sobre el mismo, su propia capacidad y,
tal día para poder continuar con el problema finalmente, el grado en que realmente desea
o el tema que usted ha comenzado a con- superarlo (Bermejo, 2010).
tarme». Una manera de centrarse en el paciente
Nos parece muy importante hacer esta y llevar un esquema de la entrevista, como
observación respecto al tiempo, pues hemos el hilo conductor de esta, es tener presente
observado a profesionales que se sienten las etapas del método de resolución de pro-
atrapados por el paciente, sin saber cómo blemas, las cuales resumimos en : problema,
«cortar» la entrevista. Esto permite al pro- causa y actividad. Veámoslas más deteni-
fesional sentirse disponible para el paciente damente:
aunque solo disponga de 3 minutos, sabien-
do que pasados los 3 minutos podrá irse y 1. Establecer el problema. El paciente nos
seguir con su planificación. Cuántas veces habla de su problema. Por ejemplo, el
oímos frases como esta: «Yo pasaría a ver paciente nos dice: «Me siento muy an-
a tal paciente, pero es tan pesado que si te gustiado».
coge no te suelta». Con ello culpabilizamos 2. Ver la causa del problema. Mediante un
al paciente de ser pesado cuando, en el fondo, feedback, establecer cuál es la causa o las
el problema es que el profesional no sabe causas del problema según el paciente, no
estructurar su tiempo y fijar los límites o el según el profesional. Por ejemplo: «Me
tiempo de duración de la entrevista. acaba de decir que se siente muy angus-
tiado [feedback]. Me imagino que tiene
TENER EN CUENTA EL MÉTODO que ser por algo muy importante que le
DE RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS preocupa [empatía]. ¿Le ayudaría o po-
COMO HILO CONDUCTOR dría decirme a qué cree que se debe?»
DE NUESTRA ENTREVISTA (Se centra en el paciente buscando las
causas y no interpretando o aconsejando.)
El profesional debe tener presentes las etapas del Nos parece importante tener en cuenta
método de resolución de problemas. la causa desde el paciente, aunque para
Este método va a permitir que los pacientes el profesional no sea esa la causa o las
sean menos pasivos, y sí más agentes y res- causas. Partir de la causa o las causas del
ponsables de su enfermedad, tratamiento y paciente es como entrar en su mundo o
curación. No debemos sorprendernos de que en su problema por la puerta que él nos
el paciente, como nos pasa a nosotros, quiera presenta. Si queremos entrar por la puerta
ejercer su derecho a opinar sobre su proceso que a nosotros nos parece la más adecua-
asistencial, y esto los profesionales no lo da, corremos el riesgo de que se sienta
tenemos que interpretar como una molestia amenazado y, por tanto, que nos cierre la
o desconfianza, pues sabemos que favorecer puerta, es decir, que no nos escuche o no
esta actitud del paciente aumenta su corres- quiera continuar la relación porque no se
ponsabilidad en el proceso terapéutico. siente comprendido, escuchado, o porque
El método de resolución de problemas se siente amenazado, etc. Recordemos
permite al paciente tomar conciencia de que, que el paciente tiene derecho a ver y
aunque las causas del problema se deban sentir las cosas como las vea o las sienta,
al contexto o a otras personas, en el fondo aunque nosotros no lo veamos igual, o
el problema es suyo, y es él quien quiere y nos parezca que se preocupa o angustia
puede hacer algo, al margen de lo que hagan por cosas que no merecen la pena, pero
los demás. El paciente debe tomar concien- en un primer momento él necesita que se
cia de que la causa de sus problemas, o de su le escuche y comprenda. Esto no es óbice
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 137
para que más tarde, cuando la confianza lleve a cabo; por eso hay que concretar:
se ha establecido, el profesional pueda quién lo hará, cuándo lo hará (día, hora,
explicar al paciente que su manera de minuto), cómo..., dónde, cuántas veces,
ver, sentir o de explicar las causas del con quién, etc.
problema no corresponden a las suyas; 4. Evaluación. Si hemos elaborado los ob-
pero si al principio no lo escucha, el jetivos con la colaboración del pacien-
paciente podría percibir al profesional te, en la evaluación aparecerá el éxito
como amenazante y cerrarse a la relación. o el fracaso en su consecución, pero el
Algunos autores, como Okun (2001), paciente será el principal responsable
piensan que es importante que después de esto. Si es positivo, esto aportará al
del período inicial en el que se expresan paciente una mayor confianza en sus
las emociones, hay que centrarse en las capacidades, así como una disminución
acciones a realizar en lugar de en lo que de la dependencia respecto al profesio-
ha pasado para facilitar la recuperación. nal. Si elaboramos los objetivos y las
Centrándose en los puntos fuertes y las actividades en lugar del paciente, no
experiencias positivas pasadas y pre- debemos extrañarnos si dichos objetivos
sentes de la persona, el terapeuta pone no se alcanzan, pues el paciente no se ha
énfasis en lo positivo en lugar de en lo sentido implicado ni ha participado en
negativo y fomenta la fe de la persona su proceso de cambio.
en su capacidad para recuperarse (Ber-
En resumen:
mejo, 2012).
3. Objetivos y acciones. Una vez escla- 1. El paciente presenta su problema.
recido el problema y las causas de este 2. Analizamos con él las causas de este
según el paciente, el profesional puede problema, partiendo de las que nos da el
decirle: «Me acaba de comentar que se propio paciente; de este modo llegamos
siente angustiado porque ve que no ha a definir el problema.
mejorado nada de ayer a hoy. ¿Qué cree 3. Establecemos los objetivos y las activida-
que le ayudaría o en qué medida cree que des para resolver el problema junto con
yo puedo ayudarlo?». Esto permite, por el paciente.
una parte, que el paciente le explique lo 4. Vemos con qué recursos cuenta el pacien-
que ha hecho hasta el presente para poder te para resolverlo (personales, familiares,
solucionar su problema; él es el agente de sociales, etc.).
su vida, y sin duda tiene muchos recursos 5. Finalmente, evaluamos con él el proceso
y ha pensado y probado cosas. Es necesa- con el fin de saber si le está ayudando
rio ver lo que ha hecho y el resultado que o no.
ha obtenido. Por otra parte, el profesional
Pongamos un ejemplo:
debe, en la medida de lo posible, estable-
cer los objetivos y las actividades con el
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paciente no por él o para él. No trazar los Paciente: «Hace varios días que no ando
objetivos con el paciente, sino en lugar bien del vientre [presenta su problema]».
del paciente, equivale a olvidar que él es Profesional: «Me dice que no anda bien
el protagonista y actor responsable de del vientre. ¿Podría concretarme un poco
su proceso de cambio, mientras que el más qué quiere decir “no ando bien del
profesional no es más que un activador vientre”?».
de este proceso. También se evita el pe- Paciente: «Pues sí, que cada cuatro días
hago de vientre; vamos, que no hago caca
ligro de que el paciente no cumpla los con frecuencia, y al hacerla me hago daño,
objetivos y las actividades, porque no y perdóneme usted por hablar así».
se sintió comprometido con ellos, sino Profesional: «No se preocupe por las
que los sintió como impuestos desde palabras, puede expresarse como le resulte
fuera por el profesional. La actividad más claro a usted. Bueno, me dice que no
tiene que ser muy concreta para que se hace caca desde hace cuatro días. ¿A qué
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138 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 139
seguro de que este le ha comprendido, etc., más completa de su problema. Nos permite
todo ello mencionado con anterioridad. confrontarle sin que sea amenazante, pues
Recordemos que la falta de comunicación es como hacerle de espejo para que vea más
con el paciente y la familia, tal y como hemos claramente su problema.
señalado, ocasiona el que haya más errores ¿Cuándo debemos practicar el resumen?
en la terapia o cuidados hacia el paciente. En primer lugar, cuando el paciente nos va
Asimismo, la falta de comunicación lleva hablando de sus problemas, conviene irle
a no poder establecer un buen diagnóstico, haciendo resúmenes de lo que nos ha dicho,
pues ¿cómo se puede hacer un diagnóstico para que así vea no solo lo que vamos cap-
si no hay comunicación con el paciente y la tando, sino también el problema o problemas
familia? Muchas veces se compensa esto con reagrupados.
la interpretación, y, por tanto, que haya más En segundo lugar, siempre conviene ha-
equivocaciones o que se den los llamados cer un resumen como una forma de terminar
errores médicos. la entrevista, ya que el hacerlo nos ayuda a
terminarla y así no la damos por finalizada
de cualquier manera. Por otra parte:
PRACTICAR CONTINUAMENTE
FEEDBACK
Si le pedimos al paciente que nos haga el
No debemos olvidarnos de hacer continua- resumen, entonces nos daremos cuenta de
mente feedback (o retroalimentación) al lo que ha captado sobre lo que le hemos
contenido, al sentimiento y a la demanda, dicho respecto a su problema o demanda y
como ya hemos señalado, de lo que nos dice verificaremos si nos hemos explicado bien
con él, y también sobre los datos fundamen-
el paciente, pues esto hará que se sienta es-
tales que él haya retenido durante la en-
cuchado y comprendido. trevista, y si fuera necesario, corregiremos
La tensión provocada por el diagnóstico, o completaremos la información.
por el dolor, el miedo, etc., así como la expre-
sión no verbal del profesional, sabemos que No dude en decirle al paciente que es-
turba la capacidad de escucha y de juicio, de criba las conclusiones para que así pueda
ahí la importancia del feedback para verificar repasarlas y no se le olviden. Esto es de suma
la comprensión del paciente. Además, esto importancia para verificar la adherencia o no
nos va a permitir centrar al paciente y llegar al tratamiento.
donde él quiere llegar, y no donde desee el En tercer lugar, si hay una nueva entrevis-
profesional. Asimismo, el feedback nos per- ta, conviene comenzar por un resumen, y me-
mitirá que haya menos errores, pues si a me- jor si nos lo hace el paciente, pues así vemos
nudo verificamos que hemos comprendido al qué es lo que recuerda de lo que estuvimos ha-
paciente y este a nosotros, podremos constatar blando, si los compromisos o tratamiento que
si el paciente se adhiere o no al tratamiento. establecimos los recuerda y los ha cumplido o
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 141
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Capítulo | 8 Puntos importantes que se deben tener en cuenta... 143
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144 SECCIÓN | II Hacia una comunicación clara y transparente
insistiendo en su confianza en seguir el plan Caruana Vañó A. La empatía en la relación con el pa-
acordado. Se le despedirá amablemente, recor ciente. Medpac. Curso de relación médico-paciente.
Madrid: Universidad Miguel Hernández-ERGON;
dándole que si tiene cualquier duda, preo- 2003.
cupación, etc., no tenga inconveniente en Cayrol A, Barrere P. La programmation neurolinguis-
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Capítulo 9
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150 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 151
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152 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 153
vida, ya sean estas positivas o negativas. es así como se dará cuenta de su capa
En definitiva, ayudar al paciente a que cidad de planificar, verificar, evaluar o
vea que él es el principal responsable de experimentar nuevas posibilidades, así
su vida y, por consiguiente, debe poner como de apreciar los resultados de es
todos los medios a su alcance para obte tas. La consecuencia de la adquisición
ner una mejoría, la curación o la acepta de esta actitud dará como resultado que
ción de la muerte. el paciente se aprecie más a sí mismo,
4. Ayudar al paciente a hacer frente a sus tenga mayor claridad y participe de
problemas con realismo en la medida una manera activa en sus experiencias
en que estos aparecen. Una vez captado de vida. El profesional debe medir la
el problema, el profesional ayudará al amplitud de la dificultad que representa
paciente a tratar de resolverlo. La percep para el paciente el hecho de ensayar un
ción que el paciente tiene de sus proble nuevo comportamiento, a fin de que
mas cambia con frecuencia. En el período adquiera confianza en sí mismo y no la
inicial, pueden aparecer como superficia frustración, el descorazonamiento o el
les; sin embargo, progresivamente se van fracaso. No olvidemos que los gestos
viendo con más profundidad. Esta es una que pueden ser muy sencillos y simples
consecuencia de la relación de ayuda y el para el profesional, al paciente pueden
paciente ha de tomar conciencia de que parecerle una verdadera montaña.
él participa en este proceso. 7. Ayudar al paciente a comunicar. El
5. Ayudar al paciente a considerar varias paciente, imbuido de su problemática y
posibilidades de ver la realidad con el ansiedad, generalmente tiene dificultad a
fin de poder reestructurarse. Hay mu la hora de intercambiar sus ideas y senti
chos pacientes que recurren a medios mientos. El profesional le ayudará a que
estereotipados para resolver sus pro los exprese, no solamente en cuanto al
blemas. Concierne al profesional ha contenido, sino también los sentimientos
cerle descubrir otros puntos de vista y que los acompañan.
diferentes soluciones susceptibles de 8. Ayudar al paciente a abrirse a los otros
ayudarle a vivir de manera distinta. Un y establecer contactos. Es el caso de
paciente, invadido de ansiedad o an ciertos pacientes que viven situaciones
gustia ante una situación de crisis en la de soledad o de falta de comunicación
que pierde cierto sentido de la realidad, con su entorno. El profesional puede
puede ignorar que hay algunos medios trabajar con el paciente las diferentes
de salir de su estado, o también de no posibilidades que tiene para no cerrarse
sentirse capaz de obrar de manera dife en sí mismo y llegar a relacionarse.
rente a como lo ha hecho hasta ahora. 9. Ayudar al paciente a encontrar un
Sin embargo, el profesional debe estar sentido a su situación de crisis, proble-
atento a no efectuar cualquier elección mas, sentido de la vida, etc. La situación
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en lugar del paciente; basta con que le que atraviesa el paciente puede cons
haga comprender que hay, habitual tituir una experiencia de aprendizaje, es
mente, más de una manera o forma de decir, una ocasión de desarrollarse y ma
solucionar un problema. durar como ser humano. El profesional,
6. Ayudar al paciente a ensayar nuevos gracias a la confianza establecida con el
modelos de comportamiento. Conjun paciente, le ayudará a buscar y a encontrar
tamente, profesional y paciente, deben una «razón de vivir» que tenga sentido
planificar un nuevo modo de compor para él; sin embargo, el profesional no de
tamiento y, con posterioridad, corres be dársela, sino solo ayudarle a buscarla.
ponde al paciente ponerlo en práctica. Es probable que el paciente no encuentre
Ensayar nuevos comportamientos tiene sentido a su vida más que en la medida
por finalidad ayudar al paciente a que en que se comprometa y se responsabi
vuelva a tomar confianza en sí mismo; lice con su vida y acepte su condición
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154 SECCIÓN | III La relación de ayuda
humana. Ahora bien, esto implica que no mucha energía. Las emociones, los
puede impedir el sufrimiento. afectos o los sentimientos son muy
caóticos, el paciente no encuentra la
Algunas características posibilidad de poder reflexionar sobre
su estado.
de la relación de ayuda
b. Segundo tiempo. Es un período en
1. Es una ayuda concreta y puntual, ya que el que el paciente siente las cosas de
se da entre dos personas en un tiempo manera oscura, y también hay una
determinado y durante un plazo concre exageración de la tensión interior. El
to. El profesional y el paciente analizan elemento dominante es el sentimiento
los hechos, los problemas, las actitudes, de estar sin recursos ni socorros; vi
etc., que ocurren durante la relación aquí ve la situación como una inminente
y ahora. Además, el paciente, ayudado catástrofe. Es una constatación de
por el profesional, fija los objetivos que fracaso lo que percibe el profesional
pretende alcanzar y la manera de conse respecto a lo que le dice el paciente
guirlos. Esencialmente, toda relación de bajo la forma de:
ayuda pretende potenciar la autonomía
del paciente (que sea menos «paciente»).
2. Es una ayuda que favorece el crecimiento «Yo he probado ya todo…; sin embargo, no
personal y la autonomía del paciente. veo ninguna salida posible a mi situación.»
Puede ser a veces correctiva o reeduca
tiva. La ayuda que el profesional ofrece El paciente manifiesta sentimien
al paciente pretende que este sea más tos y soluciones de huida o de evitar,
libre, procurándole los medios o las po de forma imaginaria, la realidad:
sibilidades que le permitan por sí mismo
crecer, desarrollarse y superar las crisis
(angustia, ansiedades, miedos, proble «Tengo miedo de morir, yo voy a dormir...»;
mas, dolores, sufrimientos, etc.). «Me gustaría poder evadirme…».
3. Es una ayuda eficaz, lo que significa que
debe atender a los objetivos que se ha
fijado el paciente con la colaboración del En definitiva, el desgarro y el su
profesional. Esta eficacia la comprobará frimiento le parecen al paciente de tal
el profesional mediante un proceso con forma insoportables que le impulsan
tinuo de evaluación. a buscar una solución inmediata a su
4. Es una ayuda en la comunicación. Es angustia más que a su problema.
necesario que el profesional ayude al c. Tercer tiempo. Este se caracteriza por
paciente a saber comunicarse en cuanto la aparición de nuevas eventualidades
al contenido, el sentimiento, la demanda y posibilidades. El profesional ayuda
y la relación (como veíamos al hablar del al paciente a que eche mano de sus
emisor). recursos, a que sea capaz de entrever
5. Es una ayuda en situación de crisis. El la posibilidad de que no todo está
paciente vive durante su enfermedad una acabado, sino que aún hay un porve
situación de crisis, más o menos grave. nir. Es posible llevar a cabo una rees
Este estado de crisis es vivido por el tructuración tratando de encauzar las
paciente de manera bien precisa. Podría motivaciones del paciente; es decir,
mos decir que hay cuatro tiempos en la ayudarle a redefinir el problema o
vivencia de la crisis: problemas y presentar nuevas exigen
a. Primer tiempo. El paciente vive como cias que le posibiliten su solución.
una cierta agitación, hay una ampli El paciente tiene necesidad de que el
ficación de la actividad desordena profesional le ayude a ver con más
da, se dispersa gastando inútilmente claridad, y con cierta distancia, lo
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 155
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156 SECCIÓN | III La relación de ayuda
Los sentimientos que algunos profesionales hacer de la propia fragilidad, y de los pro
manifiestan como difíciles de manejar están pios límites, recursos al servicio de una
principalmente relacionados con las situacio mayor comprensión; permite purificar las
nes siguientes: motivaciones que llevan a intervenir de una
1. Ansiedad: «Qué le puedo decir al pacien determinada manera de ayuda (Bermejo,
te cuando le quedan pocos días de vida». 2011). Si el profesional no tiene claros sus
O: «Qué puedo hacer o decirle cuando se problemas, existe el peligro de que los pro
derrumba y comienza a llorar, o gritar su yecte sobre el paciente y, por consiguiente,
desgracia». al abordarlo, verá en este sus propios con
2. Sentimientos depresivos: «Cuando salgo flictos. Asimismo, existe el peligro de no
de mi trabajo, según las situaciones que saber qué hacer ante las transferencias del
haya vivido en esa jornada, no puedo des paciente, o implicarse tanto en la relación
conectar de ellas y me voy para casa con que no sabe desimplicarse, con lo que ter
los problemas, implicando a mi vida de mina por «quemarse» o «eliminar» sus sen
familia. Tanto con las palabras como con timientos para no sentir el sufrimiento del
mi actitud manifiesto sentimientos de que otro, convirtiéndose en un profesional frío,
nada merece la pena, que la vida no tiene distante, «poco humano», y justificando es
sentido», etc. tos comportamientos diciendo que «hay que
3. Ira, rabia, agresividad: «La vida es in ser profesionales en la relación».
justa con algunas personas»; «¿Por qué Nos parece imprescindible que para llegar
le ha tenido que ocurrir esto a este pobre a ser consciente de las emociones, sentimien
hombre?», etc. tos, preocupaciones y necesidades de los
4. Sensación de fracaso e impotencia: demás, previamente es necesario conocerse
«Lo que más me duele es que no haya y tener conciencia de uno mismo, pues di
nada que se pueda hacer», etc. fícilmente vamos a comprender al otro si no
somos capaces de comprendernos a nosotros
La comprensión e integración de lo que mismos. Goleman (1999) nos dirá a este res
hemos dicho anteriormente sobre la comu pecto: «Sin la capacidad de darnos cuenta de
nicación nos ayudarán a hacer frente a estos nuestros propios sentimientos —o de impe
sentimientos. dir que nos desborden—, jamás podremos
Una reflexión sobre todo lo que acabamos llegar a establecer contacto con el estado de
de decir nos lleva a cuestionarnos: ¿cómo ánimo de otras personas». La experiencia del
es posible establecer, mantener y terminar propio sufrimiento suscita sentimientos de
una buena relación de ayuda sin «quemarse» comprensión, compasión, participación. La
en ella? Lógicamente, es necesario que el experiencia de los propios recursos positivos
profesional haya integrado algunas de las de curación ayuda a despertar en el otro sus
características siguientes: propias capacidades, sin hacerle dependiente,
sino responsable. De esta manera se ayuda al
Madurez psicológica que sufre a crecer en su situación (Bermejo,
2011).
El profesional de la salud, debido a su tra La persona madura, nos dice E. Fromm
bajo, tiene que enfrentarse a muchas situa (2000), siente que dar es una expresión
ciones difíciles y estresantes. Esto implica de fuerza y abundancia. En el acto de dar,
que tiene que conocerse, conocer su nivel uno expresa y reafirma su propia vitalidad.
emocional, conocer sus límites, poseer una «Cuando una persona da, crea algo en la vida
serenidad de espíritu y una sólida madurez a de la otra persona; y esa creación se refleja
fin de poder afrontar las múltiples situacio otra vez en él. Al dar verdaderamente no
nes que se le presentan sin que sean dañosas puede evitar el acto de recibir lo que se le
para él o para el paciente. Conocerse evita devuelve. El dar hace que la otra persona dé
las proyecciones no controladas, los meca también, y ambos comparten la dicha de lo
nismos de defensa inconscientes; permite que han creado.»
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 157
M. Buber (1995) nos dirá lo mismo con de que no se están satisfaciendo tus nece
otras palabras: «La relación es reciprocidad. sidades, y por tanto, te incitan a realizar
Mi “tú” actúa en mí, como mi “yo” actúa cambios. Toda reacción fuerte procede de
en ti. Nuestros discípulos nos enseñan, nues tu interior y es una señal de que algo va mal
tros trabajos nos forman… Intrincadamente y requiere tu especial atención. Ser emo
mezclados, vivimos en la corriente de la reci cionalmente maduros significa ser capaces
procidad universal». El diálogo de Buber es de identificar los sentimientos, experimen
definido como un «escuchar genuino y libre tarlos y expresarlos. Cuando controlas tus
de prejuicios». emociones, tus sentimientos, controlas tu
El profesional, nos dirá Bermejo (2012), vida y así tus sentimientos pueden aumentar
está llamado no solo a activar su capacidad de tu sensibilidad, compasión y sensación de
cuidar y ayudar a los demás, sino también a bienestar.
tomar conciencia de las propias heridas, com Bermejo (2011), citando a Nouwen
prometiéndose en un proceso de autoterapia. (1996), subraya que cuando los profe
Podríamos decir, entonces, en sentido meta sionales de la ayuda rehúsan abrirse a la
fórico, que solamente el médico herido puede conciencia de las propias heridas, entonces
curar, y de esta manera, previene también tienden a acercarse al ser humano sufriente
la sobredosis de implicación emocional el haciendo uso solamente de una de las po
riesgo del burn-out. (Secpal, 2008). laridades del arquetipo del sanador herido:
A menudo, los profesionales de la salud el poder de curación. Las consecuencias
tenemos que enfrentarnos a situaciones es negativas que se derivan saltan a la vista: el
tresantes. Estas con frecuencia dominan refugio en un trato distante emotivamente,
nuestras emociones influyendo en nuestro la tendencia a resolver los problemas de
control, dando origen a que cuando nos los demás sin recurrir a los recursos de cu
sentimos ansiosos, enfadados, agobiados, ración que el paciente posee, la utilización
abrumados, etc., cortocircuiten el proceso del otro como objeto de satisfacción de las
de escucha que sabemos es imprescindible propias necesidades personales, el fácil
para una adecuada relación empática. Ante recurso a la ritualización de las conductas,
estas situaciones es necesario centrarnos en a consejos obvios, a actitudes moralizantes
dos aspectos importantes: (recordemos los obstáculos a la comunica
En primer lugar, aprender a escuchar ción del cap. 6).
nuestro propio cuerpo. A tener conciencia de Por otro lado, la simple toma de con
uno mismo —de los propios sentimientos y ciencia de las propias heridas, de la propia
emociones—, así como de saber controlarlos, condición mortal, es insuficiente. Es preciso
con el fin de que no nos desequilibren. Si que estas se acepten y se integren. Quien es
somos conscientes de esto, fácilmente reali consciente de la propia vulnerabilidad, pero
zaremos pequeñas pausas que nos permitan es incapaz de aceptarla e integrarla, tiende
retomar nuestro ritmo. A veces basta con a alejarse de la persona que sufre, o si esta
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158 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 159
Carkhuff y otros señalan que la rela primera, siéntase bien consigo mismo; uno
ción con el paciente no es neutra, es decir, no puede ser terapéuticamente eficaz si su
siempre deja huella o influencia en la vida vida personal está alborotada. Los pacientes
de este, por lo que, o bien le ayudamos a son capaces de sentir el malestar emocional
mejorar y a ser capaz de enfrentarse y re de sus cuidadores. Trabaje para ser conscien
solver sus problemas, o por el contrario le te de sus propios sentimientos y actitudes, y
perjudicamos. de qué forma afectan a su relación terapéutica
Por tanto, es necesaria una buena y sólida con los pacientes.
formación, tanto en las técnicas de la comu Segundo, esfuércese por desarrollar la
nicación como en la relación de ayuda. En conciencia sobre el modo en que sus actos,
este sentido, hemos observado que, princi gestos y expresiones afectan a otras perso
palmente en esta última década, las diversas nas. Durante cada interacción, «distánciese»
escuelas de formación de profesionales de la de la situación y considere cómo está re
salud (enfermería, medicina, trabajo social, accionando el paciente. Con experiencia
óptica…) se han ido sensibilizando a esta y esfuerzo, la mayoría de sus actos profe
necesidad y han incluido la materia de co sionales serán terapéuticos, sin importar en
municación y relación de ayuda dentro de los qué contexto ejerza o qué tipo de paciente
programas de formación de los alumnos. Esto atienda.
es un avance; sin embargo, creemos que la Como conclusión de este punto indi
teoría, aunque está bien, no cambia actitudes caremos que para ayudar a otro de manera
y es necesario que los futuros profesionales eficaz —ya que todos podemos en algunos
encuentren modelos en la práctica, a fin de momentos ayudar—, es necesario haber reci
poder cambiar sus actitudes y que esta sea bido una sólida formación teórico-práctica y
una realidad aplicada como quien practica haber trabajado sobre uno mismo. El derecho
la técnica más sofisticada. a ayudar se basa en que este saber haya sido
integrado por la persona y se haya convertido
en una aptitud, una actitud o una capacidad
Apertura al tú y a la trascendencia
inherente a ella misma.
Los primeros psicólogos humanistas, como La ayuda no es solo una técnica adqui
Maslow, Rogers, Rollo May, Alport, Murray rida, sino también una forma de vivir. Con
y otros (1971), señalaban que como profe cluimos este punto con una cita de C. Rogers
sionales no podemos olvidarnos, en nues (1976), quien cree que todo individuo posee
tras relaciones humanas, de que somos una capacidades para crecer como persona. «El
persona abierta al tú, pero también a la tras ser humano posee la capacidad, latente o
cendencia; esto quiere decir que no podemos manifiesta, de comprenderse a sí mismo y
dejar de lado algunas de las cualidades más de resolver sus propios problemas de forma
importantes del ser humano; por ejemplo, su satisfactoria para alcanzar la satisfacción y la
capacidad de elección, los valores, el amor, eficacia necesarias para un adecuado funcio
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160 SECCIÓN | III La relación de ayuda
cuerpo y el espíritu del profesional como Toda relación entre dos personas está
individuo, de modo que convierte el cuida marcada por una ambivalencia, una especie
do realizado por aquellos que tienen con de ambigüedad. Es conveniente que insis
ciencia de sí mismos en algo intencional, tamos sobre el carácter de ambigüedad de
es decir, sabiendo realmente qué se hace y la relación: esta puede ser a la vez fuente
por qué se hace (Ledesma, 2011). De hecho, de dominio y de dependencia, de alegría
ya en 1952, Peplau (citada por Vandermark, y de miedo, de cercanía o de alejamiento, etc.
2006), destacó la necesidad y la importancia Hay toda una multiplicidad de sentimientos
que conocerse a uno mismo tiene para poder y factores que intervienen en el transcurso
desempeñar una labor profesional de cali de toda relación.
dad. Esta idea, además, ha servido de apoyo La superficialidad o la densidad de la
para autores como Cibanal et al. (2001), relación pueden tener una importancia parti
Ledesma (2011) y Summer (2010), quienes cular en el dominio de esta entre profesional
defienden la tesis de que los enfermeros y paciente. A cada instante la relación puede
deberían trabajar en su propio «self» an ser pobre o rica, cercana o lejana.
tes de disponerse a relacionarse y/o a cuidar La relación de ayuda, aunque supone un
de otros, puesto que, tal y como infieren conocimiento profundo de las reglas de la
Ni et al. (2012) en su estudio sobre las es comunicación, sin embargo, no es una comu
trategias de afrontamiento y la autoestima nicación entre dos iguales. Hay un desnivel
de 222 mujeres estudiantes de enfermería entre el profesional y el paciente. Negar esta
en China, mediante el autoconocimiento evidencia sería establecer de manera falsa la
no solamente favorecemos la mejora de relación. Uno espera de su interlocutor otra
nuestra salud mental como enfermeros, sino cosa que un simple intercambio de ideas. El
que también propiciamos el desarrollo de profesional no debe negar sus conocimien
habilidades que nos sirven para superar las tos y pedagogía, sino que debe utilizarlos al
dificultades emocionales que plantean los servicio del paciente teniendo en cuenta su
retos de nuestro quehacer diario. personalidad y conocimientos; pero tampoco
Si bien es cierto, al igual que hemos debe olvidar que el paciente también tiene
ido viendo hasta ahora, que la posesión de mucho que aportar en una relación, la cual
habilidades comunicativas y relacionales debe ser un intercambio.
—para con los usuarios, los profesionales y La relación de ayuda es un intercambio
el self— lleva asociada un impacto positi profundo entre personas, un intercambio en
vo, la falta o deficiencia a la que se refiere la donde la situación recíproca de cada uno es
bibliografía (Ammentorp, 2011; Brown et al. controlada, es decir, se establece según unas
2011; Jiménez, 2009; Jones, 2007; Yoo y reglas o una metodología. Esta metodología
Chae, 2011), también lleva asociado un gran permite que se establezca una relación se
impacto, en este caso negativo, que perjudica ria, dinámica, estructurada, que huya de la
a los usuarios, a los profesionales y a las ins rigidez, el estatismo, la rutina, y que evite
tituciones sanitarias. la dispersión; que permita implicarse, res
ponsabilizarse y de alguna manera «jugar
seriamente».
ALGUNOS PUNTOS QUE CABE
TENER EN CUENTA ANTES Algunas consideraciones
DE ESTABLECER LA RELACIÓN ¿Una relación de poder o de dominio?
DE AYUDA
El profesional tiene respecto al paciente un
Vamos a dar algunas pinceladas de ciertos poder indispensable: el de imponer ciertos
prerrequisitos que nos parece que pueden cuidados, ciertos tratamientos médicos,
ayudarnos en la acogida, el mantenimien ciertos modos de vida, etc. Ciertamente que
to y la finalización de una relación con el este poder es legítimo en sí mismo, pero
paciente. si el profesional sobrepasa determinadas
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 161
normas, es decir, si no tiene en cuenta que Veamos un ejemplo: cuando una persona
el centro es el paciente y que tiene que con se queja de una enfermedad o sufre cualquier
tar con él, hace a los pacientes dependien achaque, no es raro encontrar a ciertas per
tes, tanto en el plan material como afectivo, sonas que responden: «Ah, sí, yo también
cayendo de esta manera en la dominación estuve la semana pasada con una gripe impre
del paciente. Tenemos un poder sobre el sionante…». Esta es una manera de utilizar
paciente, pero no dominio sobre él. Tanto lo que uno vive para banalizar lo que el otro
más evitaremos este dominio cuanto más dice o siente; de esta manera reduce o des
claro tengamos nuestro papel, nuestros truye la posibilidad que tiene el paciente de
objetivos y nos centremos en el paciente poder expresar su sufrimiento o su pena; en
respondiendo a su demanda. Por ejemplo, definitiva, destruye la relación.
¿no es un abuso de poder, o de dominio, Si la persona que escucha esto ha pro
el hecho de no comunicar al paciente su fundizado en una relación consigo misma,
diagnóstico o pronóstico, cuando este nos utilizaría la experiencia de su gripe para tratar
lo está pidiendo? No negamos que haya de comprender lo que el otro puede estar su
circunstancias en las que eso sea lo más friendo.
adecuado, pero creemos que a menudo se ¿Por qué muchos de nuestros diálogos
abusa de este dominio. con los pacientes no son más que intercam
bios estériles y no una mutua confirmación?
Ni dramatizar ni minimizar La competición, las quejas sutiles, las críti
La relación de ayuda debe evitar estos dos cas, etc., degradan la relación e impiden la
extremos. Sucede con frecuencia que a un verdadera comprensión del otro.
paciente no se le dice lo que tiene y, así, se
dramatiza el dolor, el sufrimiento, el peligro, ¿Puede ser uno auténticamente
la enfermedad o la misma muerte. él y respetar al paciente?
También sucede lo contrario, es decir, Creemos que un respeto meticuloso y ex
se minimizan las cosas bajo un optimismo cesivo de la persona puede ser una manera
exagerado, tratando de ignorar o no querer sutil de rechazarla. El respeto de la persona
ver la realidad. no puede ser una destrucción de sí, pues
Ambas, dramatización o minimización, uno no puede respetar al otro si no se res
presentan el mismo peligro y, por tanto, de peta a sí mismo.
bemos evitarlas, pues es falso creer que estas No se puede negar la propia realidad
actitudes contribuyen a disminuir el dolor o existencial, ni la del otro, y el criterio de res
la angustia del paciente: en efecto, se trata peto hacia el otro es el mismo que el de respeto
de un mecanismo de huida que impide toda hacia uno mismo.
verdadera relación humana y, por consiguien Pero aquí está la sutileza: ¿cómo intervenir
te, terapéutica. en el límite del respeto hacia el otro? Creemos
que no debemos intervenir más que en el mo
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162 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 163
Por otra parte, una vez abordada la si gracias a esta actitud de respeto, interés,
tuación con el paciente, el saber alejarnos de empatía, escucha activa y feedback, el
esa situación nos permite centrarnos en el paciente puede ver más claramente
siguiente paciente o actividad y así no que nuevas perspectivas para abordar el
marnos al ir arrastrando los sufrimientos o problema.
los problemas de los demás. Se trata de vivir 3. Desempeñar el rol de acompañante:
en cada momento lo que estamos viviendo, acompañar al paciente en su trabajo de
y esto con responsabilidad. exposición y clarificación del problema,
así como en la aceptación de la expre
sión de sus emociones y sentimientos,
Saber cuestionarse a fin de conocer mejor la manera en que
Esta es una de las actitudes más impor el paciente ve o siente su situación, y de
tantes y la que más nos exige. La relación esta manera poder ayudarle.
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164 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 9 Generalidades sobre la relación de ayuda 165
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166 SECCIÓN | III La relación de ayuda
Esta figura nos permite comprender que en la profesional, mediante la puesta en práctica de
relación de ayuda tanto el profesional como las suyas, quien hará posible que el paciente
el paciente deben tener unas actitudes que baje sus defensas, o actitudes negativas, y
vayan hacia el encuentro del otro, si bien es comprenda que la actitud del profesional es
cierto que si el paciente no las tiene, es el ayudarle a sentirse mejor.
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Capítulo 10
ALGUNAS ACTITUDES
DE ACOGIDA QUE DEBE TENER
ALGUNAS CONSIDERACIONES EL PROFESIONAL
GENERALES
El saludo inicial
En la acogida se juega uno la relación. La fase
del encuentro es esencial para establecer una Si la acogida es un encuentro personal de
verdadera relación de ayuda; esta se inicia con dos expectativas, ambas esperan lo mismo:
la acogida. Comporta todo lo que el profesio ser reconocidas como personas plenas y no
nal piensa, siente y hace inmediatamente antes simplemente como un «caso» de tantos. Las
de la primera interacción, sabiendo que lo que fórmulas convencionales de educación, como
el profesional piensa, siente y hace en el trans «buenos días», según la entonación, pueden
curso de esta fase puede tener consecuencias ser acogedoras o no. La voz puede transmitir
importantes en cada una de las siguientes frialdad o cordialidad.
interacciones, pues permitirá que haya o no Estamos de acuerdo en que incluso
relación. También hemos de recordar que la las fórmulas de educación pueden llegar a
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168 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 10 Primera fase de la relación de ayuda: la acogida 169
agis (dicen los antiguos), no es algo innato y disciplina mental, debe prohibirse toda ge
espontáneo para la mayoría de los humanos. neralización, pues incluso si las apariencias
El profesional, en la medida de lo posi o las demandas de todos los pacientes son
ble, debe hacer el vacío dentro de sí mismo, idénticas, las personas son muy diferentes.
descartar de su pensamiento cualquier otra Debemos tener en cuenta las diferencias del
preocupación: sucesos del trabajo, aspectos paciente y recordar que su forma de captar y
familiares, conflictos personales, negocios, vivir la realidad no es como la nuestra. Esto
etc., con el fin de que sus «ruidos» no inter nos llevará a ser más empáticos, comprensi
fieran en la buena escucha del paciente. vos y tolerantes.
Evidentemente, esta apertura a las di
ferencias requiere un verdadero equilibrio
Acogida y estructuración del tiempo
interior, un gran trabajo personal, una ca
Dada la realidad que vivimos, en la que dis pacidad para evaluar sus ideas, sin dejar de
ponemos de poco tiempo, es conveniente, mantenerse fiel a sí mismo.
desde el momento en que acogemos al pa Un problema que puede presentársele al
ciente (como decíamos al hablar de la co profesional es el cansancio inevitable debido
municación), establecer con este el tiempo a la cantidad, la calidad y la variedad de las
que va a durar la entrevista o la relación; esto demandas de los pacientes. Esto reclama
permitirá que el paciente sea más concreto capacidad para adaptarse rápidamente a
y preciso en manifestarnos lo que le pasa, y cada nuevo paciente. También exige cierto
no ande divagando o con rodeos. Sin em entrenamiento: guardar o mantener la dis
bargo, también es cierto que esto es un pro tancia terapéutica, sin dejar de ser cálido y
blema para bastantes pacientes, que necesitan participante con el paciente. A veces, el mar
tiempo para sentir si pueden confiar en el gen entre un compromiso afectivo inoportuno
profesional como para abrirse a él y contarle y una sequedad excesivamente distante es
sus problemas. Sin embargo, si esto se lo bastante estrecho.
decimos con mucha sensibilidad, empatía y El profesional tiene también una capaci
delicadeza, el paciente lo comprenderá y nos dad receptiva limitada, por lo que debe saber
ayudará. Pongamos un ejemplo: detenerse a tiempo y tomarse unos minutos
de descanso o de relajación. La dificultad
llega cuando este se ve desbordado por la
Profesional: «Hola, buenos días. Mi nom-
bre es Juan y soy el [médico, enfermero…] cantidad de llamadas de los pacientes ante
que le va a atender. Siento decirle que solo las cuales se siente moralmente obligado a
tenemos diez minutos. Y sé que es poco responder. Si nos es posible, es preferible
tiempo, pero es el tiempo del que dispongo. «desconectar» por unos momentos a res
No obstante, si necesita más tiempo, pro- ponder a estas demandas cuando no se está
gramaremos más visitas con el fin de que disponible psíquicamente para acoger al otro
usted se sienta comprendido y atendido. en su problema y soledad. Esto también es un
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170 SECCIÓN | III La relación de ayuda
Esto permite clarificar y seguir con nues «¿Puedo hablar con usted un momento?»
tro trabajo sin que el paciente interprete que
pasamos de él o nos molesta, o no queremos solo es banal en apariencia, pues con frecuen
atenderlo. cia se trata de un modo de iniciar la relación,
de probar la buena voluntad del otro y de
darse cuenta de si este último está disponible
Actitudes prácticas para el diálogo. Bajo una forma cualquiera,
en una acogida satisfactoria esta pregunta marca el comienzo de una en
Recordemos aquí lo que decíamos al ha trevista seria, con un objetivo determinado,
blar sobre la comunicación no verbal y y no una simple conversación.
verbal, sobre las actitudes físicas y psíquicas Por otra parte, es necesario estar atento
de una buena escucha. a fin de no ir más lejos de lo que nos pide el
paciente a través de su demanda. Una simple
Actitudes físicas afirmación o asentimiento debe ser suficiente,
Estas han sido abordadas al hablar de las ac eventualmente con alguna palabra de expli
titudes de escucha: contexto físico, distancia cación. Pero no es necesario adelantarse a lo
adecuada, postura corporal, etc. que pide el paciente ofreciéndole nuestros
buenos servicios, o nuestras buenas inten
Disponibilidad psicológica ciones con una frase como:
Las actitudes psicológicas también han sido
abordadas al hablar sobre la comunicación.
No obstante, nos parece conveniente añadir «¿Qué puedo hacer yo por usted?» o «¿Qué
aquí algunas reflexiones. espera usted de mí?»
El profesional debe acoger al paciente,
que desea ardientemente entrevistarse con o aún más:
él. Esta situación casi siempre se concreta
en un proceso que en apariencia no tiene «¿En qué puedo serle útil?»
importancia, que puede manifestarse de la
forma siguiente:
Todas estas preguntas son un freno, por
no decir un impedimento para la entrevista
«¿Puedo hablar con usted un momento?» con el paciente. Esto nunca debemos banali
zarlo, pues es en estos momentos cuando se
Antes de responder a esta cuestión, con pone en juego la relación: ya que no consi
viene detenerse un instante en el contexto deramos al otro como un igual, sino como un
psicológico en el cual se ha recibido. Esto es inferior y, por tanto, el paciente en este caso
importante con el fin de que la pregunta que puede sentirse humillado.
se le dirija sea recibida cálidamente. Esta Es más adecuado decirle: «Sí, de acuer
preludia el diálogo, a veces vital para él, o al do, pero ahora solo dispongo de X minu
menos muy importante. El profesional debe tos», si es que ahora puedo escucharle, y si
ofrecer al paciente una oportunidad —quizá no puedo ahora, le puedo decir: «Mire, lo
única— de ser acogido, aceptado, compren siento; en estos momentos no puedo, dentro
dido en la totalidad de su ser: intelectual, de X minutos vendré y escucharé lo que me
moral y afectivo o emocional. quiera decir».
Esta forma de acoger debe ser tan sencilla Es importante acoger al paciente tal co
y verdadera que ofrezca confianza al pacien mo se presenta y respetar la naturaleza de la
te, y la seguridad de que sus confidencias relación tal y como él la propone. En este
permanecerán en secreto. contexto el protagonista es el paciente.
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Capítulo | 10 Primera fase de la relación de ayuda: la acogida 171
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172 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 10 Primera fase de la relación de ayuda: la acogida 173
Sin embargo, debemos estar atentos y no usted con desconfianza. Si este es el caso,
confundir el humor con la ironía. El humor ¿podría decirme qué podemos hacer para
es a menudo necesario para aportar un poco que no se sienta así?». De esta manera el
de aire fresco y mantener en equilibrio la paciente nos dirá lo que le puede ayudar
relación; la ironía, por el contrario, hiere de y así también nos ayudará a nosotros.
forma narcisista al paciente, lo pone en situa 2. Confusión. El paciente a menudo busca
ción de inferioridad, por lo que debe evitarse ayuda porque vive en la confusión, no
a toda costa, ya que esta es destructiva. ve con claridad lo que es bueno o malo
para él mismo. Oculta su verdadero yo en
las relaciones con los otros; su identidad
ACTITUDES QUE PUEDE TENER EL se reduce a los roles que desempeña, y
PACIENTE DURANTE LA ACOGIDA estos anulan su verdadera identidad
y crean en él la impresión de vivir fuera
Sin tratar de ser exhaustivos, vamos a enume
de sí mismo. Por esta razón, el paciente
rar algunas de las actitudes que puede presen
desea encontrar en el profesional a un ser
tar el paciente antes y durante la acogida en la
humano lleno de emociones (agradables
relación de ayuda. Esto exige del profesional
o no), a un ser humano que reacciona,
una gran capacidad de observación y de acep
que posee una experiencia de vida, in
tación incondicional del otro. La observación
cluso corta, a un ser humano que es
minuciosa del comportamiento del paciente,
plenamente consciente y está dispuesto
a fin de poder comprender mejor el porqué de
a compartir con él. El profesional, ante
ciertas reacciones suyas, es una parte esencial
la confusión que manifiesta el paciente,
de la relación de ayuda.
puede decirle: «Me comenta que está
Ejercitarse en la observación del com
confuso y no sabe qué es lo que le pasa
portamiento humano es una exigencia
o por dónde comenzar. ¿Qué cree que le
importante para determinar la experiencia
ayudaría para ir poco a poco viendo más
particular que refleja el paciente a través de
claro? ¿Le puedo hacer algunas preguntas
su comportamiento. Si no nos fijamos o igno
para ver si así podemos clarificar un poco
ramos el comportamiento del paciente, este
más?».
difícilmente podrá explorar en profundidad
3. Grado de vitalidad. A menudo el paciente
sus verdaderos sentimientos y sus verdaderos
se encuentra sin fuerzas, sin energías. Ca
problemas.
rece de vitalidad y esto se traduce en un
Además, hay que emitir las observacio
bajo rendimiento. Le resulta muy difícil
nes de tal manera que no hieran al paciente.
enfrentarse a las simples exigencias de la
No deben constituir más que hipótesis que
vida cotidiana. Los conflictos personales
pueden ser o no confirmadas con el tiempo, a
le afectan mucho y se siente fatigado, re
través de la observación del comportamiento
acciona y responde con lentitud, y con
verbal o no del paciente.
frecuencia sus respuestas no son perti
Veamos algunas de ellas:
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174 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo 11
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176 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 11 Segunda fase de la relación de ayuda 177
4. La demanda manifiesta, que no es la necesario pasar por esta fase de dolor por el
demanda de cambio que a primera vis abandono de su marido, pero poco a poco se
ta aparece. Para que haya demanda es recuperará».
necesario y suficiente que el paciente sea He aquí el comienzo de una cierta es
portador de un síntoma a causa del cual peranza que será para ella como un bálsamo
sufre y que él alega para solicitar la ayuda sobre una herida abierta.
del profesional. Curiosa complementariedad: como pa
ciente, ella ha recibido un poco de esperanza,
El primer trabajo del profesional consiste en un calmante para poder pasar la noche. Como
localizar el «síntoma» (demanda manifiesta) profesional, ha encontrado el medio para po
del paciente, como una tentativa de solución der soportar la desesperación del otro. Cada
que él pone en marcha para proseguir su uno ha tenido una cierta compensación por
evolución y mantener su unidad. unos instantes.
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178 SECCIÓN | III La relación de ayuda
Nos gustaría mostrar que la escucha, la conflicto. Los profesionales, a veces, absortos
ayuda a través de la escucha, puede situarse en la respuesta que tienen que dar al paciente,
a otro nivel. Entendámonos bien: no estamos olvidan escuchar la verdadera demanda y, por
diciendo que no sea necesario escuchar la consiguiente, ayudar al paciente a clarificar
demanda del paciente y decirle algo al res su problema.
pecto; pero esto es necesario en un primer Una variable que nos parece muy impor
nivel. Después, las posiciones de los inter tante es determinar en qué medida los que
locutores deben ser de interacción; incluso piden ayuda la necesitan y, sobre todo, la
aquí es muy importante que el profesional quieren realmente.
reconozca la demanda del paciente, que le dé Queremos analizar también las formas
el tiempo necesario para expresar su pena, su directas o indirectas de la comunicación,
dificultad, su desesperación y su esperanza así como los comentarios ambivalentes
de encontrar soluciones, etc., que él también de los que piden ayuda. Pero para realizar
manifieste su comprensión y que le anime a esto es preciso hacer una categoría de las
continuar hablando. primeras frases. Estas las catalogamos en
Si el profesional puede y quiere, podrá cuatro tipos:
ayudar al paciente a reconocer lo que él mis 1. Frases que reflejan incertidumbre y
mo no puede o no quiere ver porque le resulta ambivalencia. En esta categoría se in
demasiado amenazador. cluyen las primeras frases, que reflejan
Al profesional se le exige que no se pre la incertidumbre del paciente relativa al
cipite en responder a la urgente demanda. carácter de la demanda de ayuda, o bien
Por el contrario, debe ser consciente que expresan la ambivalencia actual de la
de que el paciente se dirige a él porque condición psicológica del paciente. Por
cree que le puede ofrecer una solución a ejemplo:
su problema.
Además de la demanda, el profesional
debe tener presente lo que hay más allá de es Paciente: «Buenos días, señora…».
ta, y es que el paciente vive una situación de Paciente: «Yo no sé… [silencio]. Yo que-
fragilidad, de soledad, tal vez de hipocresía rría pedirle algo… Perdone…, yo no sé si
puedo hablarle de mi problema…».
debida a las diversas máscaras y convenien
Profesional: «Sí, me parece que usted
cias sociales, de situación de duda, etc. El duda si es conmigo con quien debería ha-
paciente, gracias a la acogida, sabe que el blar de sus problemas…».
profesional le comprende y le encuentra allí Paciente: «Veamos, es que yo tengo un
donde él no esperaba y donde tiene miedo problema y no sé como resolverlo. ¿Puedo
de encontrarse. hablar con usted?».
En este nivel de diálogo, el profesional Profesional: «Sí, puede hablar conmi-
y el paciente han superado las convenien go… [silencio]. ¿Qué le sucede?».
cias sociales y las complementariedades
ilusorias. Es entonces cuando se consigue 2. Frases que expresan una demanda di-
tomar la distancia suficiente en relación con recta de cuidados. El paciente solicita
la demanda que parecía deber obtener una ayuda de una forma directa, clara y apre
satisfacción urgente. Pero es preciso que surada. Ejemplos:
haya ocasión para que, durante el cambio,
el paciente pueda expresar algo más que la
simple demanda. Profesional: «Buenas tardes, señor… Yo soy
el profesional de la tarde».
Diferentes formas de pedir ayuda Paciente: «Preste atención, por favor, a
lo que voy a decirle, es algo muy impor-
La imagen de la demanda de ayuda que se tante…».
tiene en general es la de una supresión del Profesional: «Sí…».
dolor, la ansiedad o la angustia, así como la Paciente: «Me siento muy solo; de he-
ayuda psicológica en graves situaciones de cho, tengo una depresión nerviosa bastante
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Capítulo | 11 Segunda fase de la relación de ayuda 179
seria [voz temblorosa y monótona] y en este si se puede confiar en él. Además, para
momento atravieso una depresión muy pro- algunos pacientes es una forma de entrar
funda. Voy a los médicos y a los psicólogos en comunicación. Por ejemplo:
y ninguno me dice lo que tengo [voz que
parece al borde del llanto]».
Profesional:« Sí, mmm, sí…». Profesional: «Buenas tardes, le escucho…».
Paciente: «En el fondo, hace ya algún Paciente: «Es usted enfermera o doctora,
tiempo que he perdido a mi mujer, y no ¿verdad?».
consigo olvidarla…». Profesional: «Sí, señor, soy enferme-
ra…».
Otro ejemplo: Paciente: «¡Ah!... [silencio]. De todos
modos, quiero decirle mi problema y quizás
usted pueda ayudarme…».
Profesional: «Buenas tardes, señora. Acabo Profesional: «De acuerdo».
de comenzar mi servicio y estaré aquí toda
la tarde…».
Paciente: «Me siento muy angustiada, Clarificar la demanda
tengo miedo al dolor y al sufrimiento. ¿Qué
puedo hacer?». El contenido de la demanda está compues
to de problemas vividos, de tal manera que
suele comenzar por la descripción y la ex
3. Frases que expresan la necesidad de
presión de una situación concreta, el trabajo,
trabajar sobre sí mismo. El paciente
lo que pasa en la vida cotidiana, etc. Esta
manifiesta el deseo de definirse hacia el
clase de informaciones constituyen el primer
profesional. A menudo no ve inconve
contenido de la demanda. Por otra parte, con
niente en decir cosas muy personales con
frecuencia ocurre «que todo sucede como si
objeto de que el profesional lo capte más
la demanda fuese algo que no se expresa de
fácilmente. Por ejemplo:
manera clara y directa, sino que es necesario
descifrarla a través de la forma de hablar
Paciente: «Me gustaría hablar un momento y de la observación de las situaciones que
con usted…». presentan de forma condensada e incluso
Profesional: «La escucho». ambigua».
Paciente: «Yo he hablado ya otras veces Un ejemplo, relativamente concreto, nos
con usted…». podría ayudar a comprender todo esto. Suce
Profesional: «¡Ah, sí…!».
Paciente: «Sí, yo, ¿sabe usted?, sabe
de que un paciente nos demanda una pura y
usted bien, mi problema es el alcohol». simple información. Gracias a que nosotros
Profesional: «Ya veo, continúa bebien- hablamos la misma lengua, podemos reco
do, ¿no?». nocer fácilmente su demanda explícita y, en
Paciente: «Sí, desde que perdí a mi ma- este caso, darle la información deseada. Pero
rido me siento muy sola». esto no siempre ocurre, porque los pacientes,
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Profesional: «Ya veo, me dice que se cuando piden que se les escuche, se impli
siente muy sola y usted combate la soledad can en una relación subjetiva y, en este caso,
con el alcohol… [y se queda en silencio]». podemos proponer al paciente que demanda
Paciente: «Oh, por favor, dígame algo, reconocimiento, comprender más allá del
no se quede así… Yo no sé cómo puedo
afrontar la soledad sin beber».
problema y de la demanda, lo que la motiva.
Estamos seguros de que el paciente que
expresa libremente su demanda se siente
4. Frases que expresan una demanda menos agobiado y sufre menos. Es decir,
de la identidad del profesional. El que que el análisis de la demanda debe desvelar
desea hablar con el profesional siente la la intención de las palabras del interlocutor
necesidad de identificarlo. Espera conse y la relación que hay entre la demanda y el
guir información personal de este, desea problema que este expresa para descubrir la
conocer su formación con el fin de saber orientación que se debe dar al paciente.
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los hechos que pueden ser reales u objetivos, si depende de mí, y si no, le propondré quién
incluso para otras personas. El profesional puede ayudarle, o buscaré ayuda [el profe-
debe estar atento, al mismo tiempo, al sen sional se muestra auténtico en explorar la
demanda de la paciente según sus posibili-
timiento, expresado por el paciente (pues
dades y en lo que depende de él]».
muestra si hay congruencia entre el problema Paciente: «Se lo agradezco. Mire, por-
y su vivencia). El profesional insistirá sobre que cuando pregunto sobre mi enfermedad
cómo el paciente siente lo que está viviendo. siempre me contestan: “No te preocupes, que
El material que el paciente explora suministra todo va bien”, y me dejan sin la posibilidad
al profesional los datos necesarios para com de decirle mis miedos, pues veo que cada
prender el problema (este material es como vez estoy peor. Llevo meses en los que de-
las piezas de un puzzle, que el profesional pendo exclusivamente de la medicación para
va ensamblando con el fin de que el paciente calmar el dolor, y no veo que mejore, cada
vaya comprendiendo mejor su problema). vez más medicación y yo me siento peor…».
Profesional: «Me imagino lo duro que
Por ejemplo:
tiene que ser para usted vivir con este dolor
y pensando en lo peor; no me extraña que
Profesional: «Usted desearía hablar con- se sienta tan deprimida».
migo…».
Paciente: «Sí… [con voz huidiza y tris- El profesional busca imaginarse a esta
te]». mujer en su universo emocional afectivo. El
Profesional: «Bien, señora [con voz profesional observa, cuando interacciona con
fuerte y que intenta ser amable]».
ella, que parece muy cansada y triste de tanto
Paciente: «Mmm… dime [voz llorosa]».
Profesional: «Bien, es usted quien quiere
luchar.
hablarme, ¿verdad?». Él le refleja el contenido y el sentimiento
Paciente: «¡Ah, sí!, es verdad». de su experiencia.
Profesional: «¿Cómo está?, ¿cómo se En un primer momento esta señora se
siente…? [con voz amable y sonriente]. Al nos muestra como una persona deprimida
escuchar su voz me ha parecido que usted sin causa aparente. Cuando el profesional se
se siente un poco triste, ¿no?». interesa por los aspectos que ella cuenta de
Paciente: «¡Un poco…! Si solamente su vida, ella le ofrece otra visión del mundo
fuera un poco… [voz triste]». que está viviendo y de las situaciones que
Profesional: «Un poco…».
la entristecen. Entonces actúa sin energía,
Paciente: «Mucho [voz que parece ser
un suspiro]».
debido a la ansiedad no moviliza sus recursos
Profesional: «¿Mucho?». positivos ni su potencial creativo. Se encierra
Paciente: «Sí… y bien…, yo lo estoy, en su interior y esto la lleva a hundirse más.
mucho, mucho…». El profesional le refleja el sentimiento y el
Profesional: «¿Quiere hablarme de lo sentido de su experiencia, y esto le permitirá
que le entristece?». seguir hablando de su problema.
Paciente: «Por una parte, sí, pero por Vamos a completar ahora la primera parte
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otra, pienso que usted va a hacer como los de la resolución del problema: desarrollarlo.
demás, que en cuanto les digo por qué es- Esta etapa implica la exploración del pro
toy tan triste, ponen cualquier excusa y se
blema y el profesional ha analizado ciertos
van, o simplemente me dicen que no me
preocupe, que todo va a ir bien, por lo que
elementos de la experiencia de la señora X
me callo y ya no sigo». que están relacionados con él. Ahora está
Profesional: «Parece que se siente am- más preparado para recoger otros elementos
bivalente conmigo; por una parte, quiere de la experiencia de la señora X con el fin de
hablarme de su tristeza, y por otra, duda comprender mejor el problema.
de si yo responderé como han hecho mis
colegas».
Paciente: «Efectivamente».
Comprender el problema
Profesional: «Si quiere, hablamos y le diré La exploración nos lleva a la compren
hasta dónde puedo responder a su demanda sión. Consideramos que comprendemos el
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182 SECCIÓN | III La relación de ayuda
problema cuando entendemos hasta dónde del problema y de definición del objetivo.
le afecta al paciente. Si el profesional com Este último, por su parte, se desprende de la
prende cómo el problema impide a la señora definición del problema.
X funcionar adecuadamente, entonces puede
desarrollar los objetivos que facilitarían un
Definir el problema
buen funcionamiento de esta. Tras la exploración y la comprensión, el pro
Una vez más, el profesional debe cen fesional estará preparado para definir, junto
trar su comprensión en el modo en que el con el paciente, el problema; es decir: tendrá
paciente percibe su problema. Debe ayudarle una percepción más clara y completa de este.
a que sea cada vez más consciente de los sen Debe intentar poner de relieve los elementos
timientos que vive, en relación con la actitud específicos del problema sobre los cuales
de huida de los profesionales y la familia. (profesional y paciente) pueden actuar. Al
El profesional desea comprender cómo los actuar sobre estos elementos, pueden extraer
problemas específicos que ella vive afectan los objetivos susceptibles de ser alcanzados
a su percepción de la enfermedad. posteriormente. La definición del problema
Con el fin de facilitar el desarrollo de la es una etapa muy importante de su resolu
vivencia de su situación, el profesional debe ción. Si el problema está mal definido, el
reflejar al paciente lo que expresa y el nivel profesional y el paciente encontrarán nuevas
en que lo expresa (feedback y resumen). dificultades en la elaboración de los planes de
Esta entrevista con la señora X permite al acción. Por tanto, es muy importante definir
profesional descubrir que se percibe a sí misma el problema en términos específicos y con
como alguien triste y deprimido. Ella no puede cretos. A mayor especificidad en los térmi
compartir sus dificultades, ni con los familiares nos, mayor facilidad (para el profesional y
ni con los profesionales. Y lo que es más impor el paciente) de desarrollar los objetivos y los
tante: se encierra en sí misma. El profesional planes de acción. Por ejemplo (continuamos
intenta reflejarle su experiencia. con la entrevista anterior y vamos a ver en
El profesional debe también comprender qué medida el profesional ayuda a la paciente
lo que en el paciente (en este caso, la señora a definir su problema):
X) ha podido originar el problema. Debe tam
bién comprender que la paciente se ha vuelto Profesional: «Pero entonces, su principal
vulnerable a los diferentes acontecimientos. angustia, por lo que se siente tan deprimida,
Debe reflejarle esto de forma que la paciente es que nadie la escucha. Le gustaría que le
pueda llegar a comprender su problema. explicaran por qué, a pesar de la medica-
El profesional ha descubierto, pues, que ción, no mejora».
el paciente vive muchos problemas que le Paciente: «Sí. Por una parte, que tanto mi
sobrepasan. familia como ustedes me escuchen cuando
A menudo, las dificultades del paciente les pregunto o les digo cómo me siento. Por
otra parte, que si saben lo que tengo, me lo
no se resumen en un solo problema. Como no digan y no se anden con rodeos».
se puede ocupar de todos los problemas al Profesional: «Creo que he comprendido
mismo tiempo, el profesional decidirá cuál de el motivo de su tristeza. Por una parte, que
ellos es el más urgente, en el caso de que la no huyamos y escuchemos lo que quiera de-
paciente no sepa por dónde comenzar. Como cirnos, y por otra, que le digamos de manera
punto de partida debe elegir los problemas clara y concreta qué es lo que tiene como en-
más simples, los más fáciles de resolver; de fermedad, y si se va a curar o, por el contrario,
esta manera, el paciente adquirirá confianza en no hay nada que hacer y poco a poco…».
sus posibilidades para resolver sus problemas. Paciente: «Exactamente, si poco a po-
co…, como usted dice, voy a irme para el
Concretar el problema otro mundo. En definitiva, que me digan si
me quedan días, semanas o meses de vida,
Desarrollar el problema nos lleva directa dentro de lo que ustedes conocen o han
mente a concretarlo. Concretarlo se refiere pronosticado».
simplemente a los principios de definición
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El profesional que evita los sentimientos a hablar con un psiquiatra o a hacer una
del paciente no se implica suficientemente en psicoterapia, ¿no cree?».
la relación (no olvidemos que una buena co
municación tiene en cuenta tanto el contenido Acabamos de ver en este extracto de en
como el sentimiento que la acompaña). Pero trevista cómo el profesional, en el momento
la actitud contraria puede también representar en que encuentra cierta dificultad en la en
un problema para el profesional. Es decir, el trevista, antes de escuchar y profundizar en la
profesional que se implica exageradamente demanda del paciente con el fin de entender
en una relación puede, o bien sentirse dema claramente el problema, le propone una ayu
siado preso de sus emociones y sentimientos, da por parte del psiquiatra. No negamos que
o bien responsabilizarse de la «curación» del en ciertas ocasiones sea lo más conveniente,
paciente. En el primer caso, el profesional no pero nos parece demasiado prematuro que
ayuda, pues no guarda la pertinente distancia el profesional evite las primeras dificultades
terapéutica, se ve inmerso en el sistema del en la relación con el paciente remitiéndolo a
paciente; en el segundo caso, tal relación otra persona. En este sentido, decimos que
hace que el paciente pierda confianza en sí el profesional no asume su responsabilidad,
mismo, en su propia credibilidad y en su sino que huye de ella, y sabemos que en la
poder decisorio. mayoría de los casos el paciente no va a recu
El profesional debe mantenerse atento, rrir al psiquiatra, pues pensará que lo están
tanto durante como después de la entrevista, tratando de loco y él no está loco.
para situarse adecuadamente ante el paciente.
Calidez humana
Responsabilidad
Para ser cálido, el profesional debe ver al
En la relación interpersonal, la responsabi paciente como persona, independientemente
lidad personal reside también en el contrato de toda evaluación de sus comportamientos
terapéutico entre el profesional y el paciente. o de sus pensamientos. Permite al paciente
Todos los profesionales (en particular, los vivir experiencias y emociones personales,
que carecen de experiencia) se sienten con sean cuales sean, sin intentar en ningún
frontados a problemas de conciencia cuando momento dominarlo, juzgarlo o criticarlo.
se percatan de que los hábitos y los compor Por su calidez y cordialidad no posesiva, por
tamientos de los pacientes son desagradables, el tono de su voz y por sus actitudes, trans
por lo que usan mecanismos de defensa o mite al paciente el siguiente mensaje: «Yo
establecen una comunicación poco funcional. estoy aquí para responder a sus necesidades
El profesional debe afrontar con satisfacción y para facilitar su evolución, no la mía». Una
el problema de la responsabilidad. Debe atmósfera de intimidad puede entonces de
clarificar cuál es su responsabilidad. Por sarrollarse y ser compartida implícitamente
ejemplo: por el profesional y el paciente, lo cual va a
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cree que eso puede durar?, y que siga divir- Paciente: «Buenas tardes. Me gustaría
tiéndose de esa forma…». que me informara acerca de algún lugar
Profesional: «Bueno, déjele que se di- donde se ayude a los toxicómanos [hombre
vierta, porque usted no puede hacer dema- joven]».
siado, ya se le pasará, ¿no? [un consejo y Profesional: «Esto quiere decir que usted
un juicio que no proceden]». tiene problemas y toma drogas [interpreta]».
Paciente: «Pero es que llega un momen- Paciente: «No, es para un familiar [dice
to… en el cual…, es decir, que él continúa con bastante timidez]».
yendo allí solamente porque ha visto que yo Profesional: «Usted está pasando por
no soy capaz de ir a ver a esta mujer, ella un mal momento, ¿no es cierto? [induce]».
me insulta y yo me callo…». Paciente: «Mmm, pero…».
Profesional: «No, evidentemente usted Profesional (interrumpiendo al paciente):
no tiene nada que hacer con esa mujer. «Ya veo…, usted desea entrar en un progra-
Yo no sé cómo a ella no le da vergüenza… ma de desintoxicación, de rehabilitación,
[consejo y juicio, no le responde mediante ¿no?».
un feedback ni se centra en ella, por ejem- Paciente: «Pero…».
plo, diciéndole: “¿Qué cree que le ayudaría Profesional: «Sea lo que sea, está bus-
en esta situación?”]». cando ayuda, entonces voy a proporcio-
Paciente: «Tiene usted razón». narle la documentación relacionada con
Profesional: «Bueno, continúe así, en las comunidades toxicómanas».
todo caso usted no debe hacer nada con Paciente: «Sí, gracias…».
esa mujer [consejo]».
El profesional no ha permitido que el
En la escala de medida de la empatía, este paciente exprese su demanda latente, sino
profesional se encuentra en el nivel 1; cree que la ha juzgado e interpretado.
mos que esta forma de abordar la relación no
solo no facilita la ayuda, sino que es nociva. Respuesta de apoyo
Este tipo de respuesta pretende ofrecer al
Respuesta interpretativa paciente ánimo y consuelo. Se considera
natural pensar en lugar del otro. Se trata de
El profesional pone el acento en algún aspec tranquilizar, consolar al otro, restar importan
to que él considera esencial. En este tipo de cia a su problema (recordemos los obstáculos
respuestas, el profesional proyecta su propia a la comunicación descritos al hablar de la
forma de comprender, su elección personal comunicación).
o su teoría. Es una respuesta excesivamente pater
Esta respuesta induce en el paciente un nalista.
sentimiento de incomprensión, de sorpresa, Las reacciones inducidas en el pacien
pues él no siente que la respuesta esté muy te son:
relacionada con su demanda.
Otras posibles reacciones del paciente 1. Deseo de dependencia, de sumisión, de
son: ser guiado.
2. O bien rechazo al sentir que el profesio
1. Desinterés para continuar la comunica nal manifiesta compasión o piedad por él.
ción, ya que no se siente comprendido.
2. Aparentar estar de acuerdo o fingir. Es una actitud en la que se espera que todo lo
3. Irritación latente que puede llegar a ma haga el profesional; por tanto, el paciente no
nifestarse. continúa con la exploración de su problema.
4. Bloqueo en la reacción ante la incom Por ejemplo:
prensión del profesional.
Por ejemplo: Profesional: «Buenos días [tono que parece
indicar fatiga]».
Paciente: «Buenos días, por favor [aire
Profesional: «Buenas tardes, ¿cómo ha pa- de duda], usted, ¿usted podría escucharme
sado la tarde?». un momento?».
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Profesional: «Sí, claro que sí, yo estoy al paciente, ya que le aborda en su inti
aquí para eso». midad sin pedirle permiso y, además, no
Paciente: «Bueno, me siento muy mal, utiliza la información recibida.
cada vez tengo más dolores de espalda, esto
2. Si queremos obtener alguna información
me impide trabajar y me hace sentir muy
deprimida».
por curiosidad, nos parece que lo más
Profesional: «Mujer, tiene que animarse, honesto sería decirle al paciente: «De
pensar en cosas buenas, ya verá como todo seo hacerle una pregunta por curiosidad,
va a pasar». (El profesional con esto intenta ¿querrá responderme?».
tranquilizar a la paciente, pero minimiza el 3. También puede ocurrir que el profesional
problema y el sentimiento de la paciente, pregunte con la intención de obtener una
por lo que no solo no ayuda, sino que hará respuesta determinada; por consiguiente,
que la paciente no siga hablando al no no escucha las respuestas que le da el
sentirse comprendida; una respuesta más paciente.
adecuada por parte del profesional hubiera
4. A veces el profesional plantea preguntas
sido, mediante feedback y empatía, decirle,
por ejemplo: «Me imagino lo duro que tiene
que interrumpen y confunden al paciente
que ser para usted ver que no mejora y que y que a menudo le incomodan, ya que no
esto le impide trabajar. ¿Qué cree que le sabe qué responder o si las ha respondido
ayudaría para sentirse menos deprimida?»). bien o mal.
5. Muchas preguntas carecen de sentido o,
Fácilmente constatamos que esta for cuando menos, en nada facilitan la buena
ma de dirigir la relación no es adecuada; marcha de la entrevista. Por esta razón, el
intenta de alguna manera apoyarla e in profesional debe reflexionar antes de pre
cluso tratar de comprenderla, pero no se guntar a fin de tener claro por qué quiere
centra en la demanda de la paciente y qué es hacer esa pregunta o qué pretende con ella.
lo que esta espera del profesional. 6. Otras veces las preguntas responden a la
propia ansiedad del profesional, y tam
Respuestas investigadoras bién sirven para llenar el tiempo, pues
el profesional no sabe cómo abordar los
Hay profesionales que creen que su función
silencios.
principal en la entrevista consiste en plantear
7. Cuestionar o preguntar —salvo cuando es
preguntas.
necesario obtener una información com
A primera vista, su razonamiento puede
pleta o aclarar algún aspecto del mensa
ser el siguiente: hacer preguntas muestra
je— muestra que el profesional persigue
interés por la situación o el problema del
siempre un objetivo concreto, incluso si
paciente; por tanto, cuantas más preguntas
este es erróneo.
haga, más eficaz será la entrevista.
8. A través de las preguntas el profesional
Toda pregunta que hagamos al paciente
conduce al paciente donde desea, pero
debe acompañarse de una explicación de
¿coincide con el objetivo del paciente?
por qué se la hacemos. Esto clarificará si
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la pregunta se le hace por curiosidad o por Y pueden producir las siguientes reacciones:
necesidad de obtener el máximo de infor
1. Cuando el profesional pregunta demasia
mación para poder ayudarle mejor (recor
do, el paciente puede sentirse «acosado»,
demos a este respecto lo dicho al hablar de
y esto provocará cierto malestar durante
la comunicación).
la entrevista.
Además, somos muy reticentes ante es
2. Si el profesional interroga continuamente,
ta forma de dirigir la entrevista porque el
corre el riesgo de convertir la entrevista
paciente se siente interrogado y sin saber
en un interrogatorio policíaco: preguntas
adónde quiere llegar el profesional.
y respuestas. Uno espera la pregunta, el
Las razones son las siguientes:
otro la respuesta, sin que el paciente
1. Puede ser que el profesional pregunte por disponga de la libertad necesaria para
curiosidad. En consecuencia, no respeta decir lo que desea.
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192 SECCIÓN | III La relación de ayuda
chas de las personas que se cruzan en nues entrevistas de ayuda nos sorprende constatar
tro camino, lo que lleva a estar muy atento que una entrevista o una serie de entrevistas
al diálogo que se tiene con ellas. Es preciso, pueden tener éxito cuando el profesional se
particularmente, porque la posición que ocu contenta con estas respuestas, de feedback
pa el profesional puede darles la ocasión o de simple aceptación. ¿Cómo explicarlo?
de pedir ayuda. La primera razón es, sin duda, que el
Si las personas piden ayuda, es necesario profesional respeta profundamente a la
admitir la posibilidad de que existan proble persona que está frente a él y se lo trans
mas serios —aunque nada hasta ese momento mite, en especial gracias a la franqueza y la
nos lo haya indicado—. Es necesario aceptar calidez de sus expresiones. Otra explicación
y procurar a estas personas una relación que es que las personas capaces de escuchar a
les permita poco a poco encontrar su equili otras y de aceptarlas son relativamente raras
brio. Si estas personas pudieran resolver sus en nuestra sociedad. Encontrar un receptor
problemas fácilmente, o si pudieran abrirse atento y comprensivo —en lugar de un in
libremente a alguien, tal vez no necesitarían terlocutor que se empeña en dar consejos
la ayuda del profesional. Pero ya que ne o reprimendas— es lo que más ayuda a la
cesitan comunicarse, como profesionales, persona a expresar sus dificultades y a exa
estamos seguros de que ellas se enfrentan minarlas a fondo. En definitiva, se trata de
a dificultades que —por el momento— las aplicar las actitudes rogerianas de las que ya
sobrepasan. ¿Cómo ayudarlas? No simple hemos hablado.
mente diciéndoles lo que deben hacer, sino
permitiéndoles manifestar sus dificultades de Saber observar
forma que puedan clarificar bien todos los Recordemos lo que hemos mencionado en el
elementos. Estas personas se sentirán mejor capítulo dedicado a la observación.
en la medida en que encuentren soluciones Sabemos que el proceso de observación
más razonables. es considerado desde siempre como un ele
mento esencial en la práctica de la relación
Aceptar de ayuda. La observación es un proceso in
En esta segunda fase de la relación, el pro tensivo que exige concentración y habilidad
fesional aprenderá a manifestar, sin mostrar para recoger las informaciones accesibles a
acuerdo o desacuerdo con el contenido ex todos los sentidos.
presado, que acepta y comprende los pro Se trata de observar, sobre todo, el com
blemas del paciente. Esto no es fácil, y no se portamiento verbal.
conseguirá sin gran esfuerzo. Lo más sencillo El comportamiento verbal ofrece con fre
será manifestar reacciones elementales tales cuencia índices precisos del estado emotivo
como una ligera entonación o feedback que del paciente, así como de su modo de pensar.
animará al paciente a continuar. El paciente Se debe aprender a observar las carac
siente así que puede apoyarse en el profesio terísticas generales del lenguaje, como el
nal y que es aceptado. timbre, la pronunciación, la fluidez, los sus
Iremos más lejos en la aceptación si se piros, etc. Se observará también la rapidez del
le pide al paciente, a veces mediante una lenguaje y se la relacionará con la actividad
pregunta, que explique su problema: «¿No motora y los estados emocionales. Además,
querría decirme usted algo más?», o: «Esto debe observarse la calidad del lenguaje del
no está demasiado claro para mí, ¿querría paciente (cultivado o no, incoherente, lógico,
usted explicármelo un poco mejor?». sistemático, silencioso, etc.) con el fin de
Tales cuestiones no manifiestan acuerdo adaptarse a él.
ni desacuerdo, pero prueban que el profesio La observación del comportamiento
nal se interesa por los detalles del problema. verbal del paciente, así como de su paralen
Más tarde, en la tercera fase, el profe guaje, permite deducir ciertos elementos de
sional puede permitirse confrontar, interpre su personalidad. Por ejemplo: si alguien se
tar, etc. Sin embargo, escuchando algunas queda parado durante la relación, pensaremos
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que es una forma de expresar inhibición, que paciente, sino que interroga sin saber adón-
algo le molesta, le bloquea. Si alguien cambia de quiere llegar).
bruscamente de tema en el curso de la rela Paciente: «Ninguno».
Profesional: «¿Qué edad tiene usted?
ción quiere decir que intenta evitar afrontar
[sigue en la misma línea]».
algún aspecto. Paciente: «Treinta y cinco años».
Descubrir en todas nuestras actitudes un Profesional: «Pues entonces, rehaga su
sentido directo, expresivo. La sorpresa, la vida y no se preocupe más por él, no mere-
cólera, la agresividad, el miedo, la angustia, ce la pena. Pero, claro, tal vez es más fácil
la irritación, la exasperación, el nerviosismo, vivir dependiendo de él que asumiendo su
el placer, la satisfacción, el displacer, la ver vida…» (como vemos aquí, el profesional,
güenza, la nostalgia, etc., se expresan no solo en vez de escuchar con empatía, proyecta
mediante palabras, sino con frecuencia con su manera de ver las cosas haciendo jui-
algo más que palabras, por el tono, los sus cios de valor sobre el comportamiento de
la paciente).
piros, las risas, etc., y otros comportamientos
no verbales.
En un ejemplo como el que acabamos
de transcribir vemos que la paciente no se
Observar todos estos estados, y reflejárselos implica, porque la actitud del profesional no
al paciente diciéndole lo que pensamos o es de centrarse en la paciente atendiendo a
interpretamos, nos permitirá comprender
su demanda, sino que la juzga e interpreta,
que lo que está claro para el paciente tam-
bién lo está para mí, pues de lo contrario el
no muestra atención y observación hacia
paciente podría no sentirse comprendido. la paciente. Esto se manifiesta a través del
lenguaje verbal y no verbal del profesional.
El profesional también debe saber ob También conviene saber que el paciente ob
servarse a sí mismo. No es suficiente con serva ambos lenguajes del profesional, aun
que observe a su interlocutor. Es necesario en los momentos de silencio de este.
también que se observe a sí mismo, por di El profesional debe saber observarse y
ferentes razones: observar las reacciones del paciente con el fin
de comprender lo que ocurre en la relación y
1. En principio, para no proyectar sobre el en la situación aquí y ahora. Debe saber con
paciente sus propias opiniones, creencias, trolar las interacciones y sus actitudes de tal
sistema de valores..., etc. forma que obtenga, lo mejor posible, todo lo
2. Por otra parte, para distinguir las reac que el paciente desee comunicarle.
ciones que manifiesta la personalidad del
paciente de las que son producto de la Actitud estructurante de la entrevista
interacción con el profesional. El profesional debe tener una cierta estruc
tura de la entrevista; aunque no sepa cómo
La observación nos exige estar atentos a desarrollarla detalladamente.
las actitudes rogerianas y de Carkhuff. A A menudo el paciente se siente confuso
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continuación, observaremos lo que ocurre o interpreta mal las informaciones que recibe
cuando estas no están presentes en la relación durante la entrevista. Esto puede ser un signo
profesional-paciente. Por ejemplo: de ansiedad o de angustia, ya sea por la situa
ción que está viviendo o por no saber cómo
(El profesional se siente fatigado, a conti- comenzar la entrevista. El profesional debe
nuación exponemos un extracto de la en- estar muy atento a este fenómeno con el fin
trevista. Se trata de una mujer que quiere de que el paciente no se angustie en exceso.
hablar con el profesional de los conflictos Es necesario estructurar la entrevista
que tiene con su marido.) para:
Paciente: «… Mi marido está con otra
mujer desde hace dos años». 1. Establecer una relación con el paciente.
Profesional: «¿Y tiene usted hijos?» 2. Mostrar un verdadero deseo de desangus
(no escucha ni muestra empatía hacia la tiarlo.
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194 SECCIÓN | III La relación de ayuda
3. Recoger los datos pertinentes sin olvi más o menos perturbada de la realidad, o
dar: la presentación del problema, los sus disfunciones personales. Su rol consiste
acontecimientos provocadores de la particularmente en identificar y ofrecer un
demanda, la descripción de otros proble feedback sobre las reacciones del paciente,
mas que hayan influido en la situación sus posibilidades y su potencial. El paciente
de crisis; observar su funcionamiento puede utilizar su potencial para resolver
psicosocial y sus recursos en otras si positivamente sus problemas. Para que la
tuaciones similares, conocer el nivel relación pueda continuar es necesario que
actual de motivación para enfrentarse a esta alianza terapéutica se consolide, sobre
la situación, etc. todo cuando el paciente experimenta más
4. Analizar las informaciones ofrecidas por ansiedad y una cierta resistencia hacia los
el paciente. cambios interpersonales.
5. Evaluar su comportamiento cognitivo,
emotivo y de acción (profundizaremos ACTITUDES DEL PACIENTE
en estos aspectos en la tercera fase de la
DURANTE ESTA FASE
relación de ayuda).
6. Evaluar con el paciente su situación ac Durante esta segunda fase, el profesional
tual. puede mejorar la relación de ayuda con el
7. Desbloquear las resistencias iniciales del paciente si es consciente de las habilidades y
paciente y, tras valorar la primera fase de las actitudes de las que este dispone.
la relación de ayuda, ofrecerle los medios Entre las cualidades eficaces para obte
adecuados para una intervención más ner éxito en la relación «psicoterapéutica»
positiva. consideramos que el profesional debe: des
8. Establecer los aspectos prácticos de la pertar los sentimientos personales del pa
relación. ciente; personalizar las emociones; el deseo
9. Estudiar con el paciente las diversas es de autoexploración y de cambio, así como la
trategias para solucionar su problema. habilidad para diferenciar la demanda, los
problemas, el contenido y los sentimientos
Recordemos lo señalado al referirnos a la co
que le acompañan.
municación, donde exponemos que el profe
En efecto, la eficacia en la relación te
sional, al tener una entrevista con el paciente,
rapéutica dependerá en gran medida de que
debe tener claro el objetivo por el que va a
el paciente tome conciencia y se muestre
verlo y explicárselo.
motivado a asumir la responsabilidad de sus
Presentamos a continuación un esquema
emociones y sus actos.
a modo de ejemplo (tabla 11-1).
Ciertos pacientes actúan como si sus
problemas fueran totalmente externos e in
Alianza terapéutica dependientes de su control, como una con
Si el profesional utiliza las actitudes y las secuencia del destino, de la mala voluntad
aptitudes que facilitan la relación que aca o de la envidia de los otros, del azar o de la
bamos de abordar, y si el paciente posee voluntad de Dios. La relación terapéutica
un mínimo de cualidades y motivaciones puede ser aún más eficaz si el paciente re
necesarias para implicarse en la relación, conoce las emociones como propias y si es
ambos pueden comprometerse en una alianza capaz de relacionarlas con el contenido que
terapéutica. En este compromiso relacional expresa y con sus propios comportamien
terapéutico bilateral, el profesional actúa co tos. En muchos casos, los pacientes no se
mo una persona que busca verdaderamente enfrentan con las emociones que sienten;
encontrarse con el paciente. no las aceptan, o las atribuyen a otros o a
El profesional, al principio, centra de situaciones que les son ajenas. De este modo
manera consciente la relación sobre los as no se responsabilizan, pues ponen la causa de
pectos sanos y racionales del paciente para, a su problema en acontecimientos externos a
continuación, ayudarle a modificar su visión ellos y ante los que no pueden actuar. Esta es
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Capítulo | 11 Segunda fase de la relación de ayuda 195
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196 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 11 Segunda fase de la relación de ayuda 197
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200 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 11 Segunda fase de la relación de ayuda 201
padre, amigo, amante...) y tratar de aportar debe tomar conciencia de este fenómeno para
a la situación actual ciertos elementos signi actuar positivamente y no perjudicar la com
ficativos de relaciones pasadas. prensión del paciente.
La contratransferencia aporta un índice El primer reto para el profesional, antes
de conflicto no resuelto por parte del profe de resolver la transferencia, es intentar preve
sional y que se expresa mediante omisiones, nirla, es decir, ser auténtico en la relación no
demandas, sensaciones exageradas de abu favoreciendo falsas expectativas ni jugando
rrimiento o de familiaridad, bien sea esta roles que no son propios del profesional,
abierta o simulada. como por ejemplo, «jugar a ser el salvador»,
Por esta razón, consideramos indis a «que es imprescindible», a creer que es «el
pensable para los profesionales la supervi único que le puede ayudar», etc. Cuando se
sión, con el fin de que ese sentimiento no dan estas actitudes, no es de extrañar que
tenga un efecto inhibidor en la relación. Una se dé el burn-out.
buena supervisión puede ayudarle a separar El profesional debe preguntarse con fre
sus sentimientos, sus pensamientos y sus cuencia cuál es su nivel de autenticidad. Esta
comportamientos pasados, reflejo de con exigencia va a permitirle adoptar actitudes
flictos no resueltos y que el profesional está adecuadas ante los fenómenos de transferen
proyectando sobre el paciente. El profesional cia y de contratransferencia.
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Capítulo 12
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204 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 205
capaz de hacer frente a las situaciones en las Paciente: «En el fondo, ¿sabe usted,
que no se atreve a resolver sus problemas. señora?, todos los hombres son iguales»
El objetivo del profesional en esta fase es (generalización; además, ¿qué quiere decir
con eso?; hay una mala comunicación y
confrontar los mecanismos y las resistencias
existe el peligro de que el profesional jue-
que emplea el paciente y que impiden la rees gue a adivinar o a interpretar, de aquí que
tructuración. le pida una clarificación).
Profesional: «Yo no acabo de compren-
Escala de R. Carkhuff para medir der lo que usted acaba de decirme: “Todos
el nivel de confrontación los hombres son iguales”».
Nivel 1. El profesional no presta atención a Paciente: «Mmm… Es que mi novio me
ha dejado y la vida para mí ya no tiene sen-
las incoherencias del paciente.
tido sin él [la paciente llora durante un mo-
Nivel 2. El profesional guarda silencio mento]. Por esto he intentado suicidarme.
ante las divergencias del paciente e ignora ¿Comprende ahora por qué todos los hom-
así el profundizar en grandes zonas de su bres son iguales?» (selección, la paciente no
comportamiento. tiene en cuenta todos los otros aspectos que
Nivel 3. El profesional, a pesar de que es le han podido conducir a la ruptura; aquí el
consciente de las incoherencias del paciente, papel de la profesional consiste, en primer
no se refiere directamente ni indirectamente a lugar, en ser empática con la paciente y
ellas. No las ignora, pero tampoco las utiliza. establecer un clima de confianza para, pos-
Nivel 4. El profesional escucha de forma teriormente, trabajar con ella la manera de
abordar su problema o de ver las cosas).
directa y específica las incoherencias que co
Profesional: «Señorita, ¿le puedo pre-
munica el paciente y se las comunica a este. guntar alguna cosa con el fin de poder ver
Nivel 5. El profesional sintoniza conti un poco más claro lo que acaba de decir-
nuamente con las incoherencias que aparecen me?».
en la comunicación con el paciente. No re Paciente: «Sí, por supuesto, por eso
chaza en ningún momento las posibilidades deseo hablar con usted».
y las capacidades que tiene el paciente para Profesional: «En primer lugar, con rela-
enfrentar estas divergencias. ción a que “todos los hombres son iguales”,
Por ejemplo: ¿es la primera vez que usted ha discutido
con su novio?».
Paciente: «No, en el fondo hace ya al-
Profesional: «Buenas tardes, señora. Yo soy gún tiempo que la situación entre nosotros
la enfermera que se ocupará de usted esta era muy tensa. Los otros chicos con los que
tarde. Voy a pasar con usted unos quince había salido antes de estar con mi novio
minutos con el fin de que nos conozcamos también me habían dejado. Sin embargo, yo
un poco más y para saber si hay alguna cosa me sentía muy apegada al que me acaba de
que usted desee decirme». dejar. Por esto pienso y me digo que todos
Paciente: «Buenas tardes, señora. Sí…, los hombres son iguales».
me gustaría tanto…, hay tantas cosas, que Profesional: «Bien, me parece que al
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no sé por dónde comenzar. Me encuentro decir que todos los hombres son iguales,
muy perturbada [una joven de veinticuatro usted está generalizando, y sabe usted bien
años]». que no todos los hombres son iguales. Por
Profesional: «Sí, me dice que tiene varias otra parte, existe el peligro de que si usted
cosas y que en estos momentos se siente piensa que todos los hombres son iguales,
muy perturbada». entonces su acercamiento a ellos estará
Paciente: «Estoy viviendo durante este condicionado por esta aprehensión».
último tiempo una situación muy difícil. Paciente: «Sí, en el fondo es verdad lo
¿Sabe usted?… yo he hecho una tentativa que acaba usted de decir. Probablemente
de suicidio». soy yo quien, ante lo sucedido, me he de-
Profesional: «Sí, me está diciendo que jado llevar por mi rabia…».
no sabe cómo hablarme de una situación Profesional: «Por otra parte, usted me ha
difícil que está viviendo que le ha conduci- dicho que ha salido anteriormente con otros
do hasta una tentativa de suicidio». chicos y que todos la han dejado. ¿Qué es
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206 SECCIÓN | III La relación de ayuda
lo que piensa respecto a esto? ¿Qué es lo 11. Las huidas y el rechazo de la responsa
que siente?». bilidad.
Paciente: «Sí, ¿recuerda que al principio 12. Las necesidades no reconocidas o no
de nuestra conversación le he dicho que me
satisfechas.
sentía muy perturbada? Ahora usted me pre-
gunta qué es lo que yo siento. Sinceramente,
13. El contenido del mensaje con el senti
me siento muy angustiada, pues me estoy miento que le acompaña.
dando cuenta de que el problema no está en 14. Etcétera.
los hombres sino en mí. Me asusta recono-
cerlo y no sé cómo salir de esta situación».
Cualidades de una buena
En este ejemplo, la profesional alcanzaría confrontación
los niveles 4 y 5 en la escala de confronta 1. Esta debe darse una vez establecido un
ción. Constatamos que, gracias a la actitud buen clima de confianza, es decir, que
de escucha activa y de confrontación de la se haya dado la primera fase de la rela
profesional, la paciente se apropia del pro ción o acogida, así como que se haya
blema que antes tenía tendencia a proyectar clarificado y definido el problema.
sobre los otros («todos los hombres son 2. Debe ser específica: evitar hablar en
iguales»). La profesional ha obligado a la términos generales.
paciente a centrarse en ella misma y a con 3. No debe atenerse a una descripción ina
frontar su actitud sin sentirse amenazada o propiada del comportamiento, sino que
juzgada por aquella. ha de suministrar indicaciones sobre la
manera de intercambiar.
¿Qué es lo que se ha de confrontar? 4. Debe ser propuesta, nunca impuesta.
5. Debe hacerse en el momento oportuno
De manera general podemos decir que el y ser apropiada.
profesional debe confrontar al paciente: 6. No debe entorpecer las otras prioridades
1. Toda actitud o comportamiento des del proceso de relación de ayuda.
tructor, dirigido hacia sí mismo o hacia 7. Debe emanar de una voluntad autén
los otros. tica de ayudar al paciente y no de un
2. Las incongruencias entre el lenguaje deseo de descargar sobre él nuestras
verbal y el no verbal; entre lo que dice propias tensiones o agresividades.
y lo que da a entender, etc. 8. Debe ser directa y respetuosa teniendo
3. Su manera de ver la realidad frente a en cuenta el contexto.
otras formas de abordarla. 9. Debe acompañarse de respeto a la liber
4. El no respeto a las reglas establecidas o tad y responsabilidad del paciente.
aceptadas durante la entrevista cara a cara. 10. Etcétera.
5. Los desconocimientos o falsos conoci
mientos que pueden subyacer a lo que
el paciente dice. ACTITUDES DEL PROFESIONAL
6. A menudo el paciente subestima o sobre DURANTE ESTA FASE
estima la situación, a las otras personas DE CONFRONTACIÓN
o a sí misma. Evitar juicios y consejos
7. Las exageraciones.
8. Los juegos psicológicos (de los que nos Anteriormente hemos insistido en el hecho
habla el análisis transaccional). de que lo más importante es comprender al
9. Las generalizaciones, las distorsiones, paciente con el fin de que este se sienta com
las eliminaciones. prendido y amado; ahora bien, juzgar impide
10. Los comportamientos que derivan de esto, pues cuando la persona es juzgada se
mensajes estereotipados. Por ejemplo: siente incomprendida, culpable y, en cierto
«Debes agradar a todo el mundo». modo, aplastada por quien la juzga.
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 207
reales. Estos los encontramos en todos los empatía de nivel 2 permitirá sobrepasar esta
pacientes, incluso en el más hundido. resistencia y que el paciente no se sienta tan
De todas formas, el profesional debe estar amenazado.
atento para no desvalorar nunca al paciente. No debemos olvidar que si durante la
No hay nada que deteriore tanto una rela confrontación se acumulan en el paciente
ción de ayuda como devolver al paciente una numerosas actitudes de resistencia, esto
imagen defectuosa de él mismo. Si verda podría perturbar la relación o la entrevista.
deramente el profesional debe hacerlo, con El profesional, muy preocupado porque el
el fin de confrontar al paciente, tendrá que paciente avance, no debe quemar etapas y
esperar a que la confianza se haya establecido ser respetuoso con el ritmo de este. El pro
y escoger el momento más oportuno en el fesional debe aceptar que el paciente aún no
cual el paciente sea capaz de aceptar la con está preparado para la confrontación y que,
frontación. por tanto, debe pasar más tiempo en las fases
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208 SECCIÓN | III La relación de ayuda
precedentes de la relación de ayuda. Veamos Paciente: «Sí, es verdad. Todo eso con-
un ejemplo: tinúa inquietándome, pues si bien tengo
las cosas claras en cuanto a la razón, sin
embargo mis sentimientos… [silencio]».
(Se trata de una joven preocupada porque
no ve muy claras las relaciones con su
novio.)
Este ejemplo pone de manifiesto que la
Profesional: «Lo que le molesta y preo- réplica que le hace el profesional a la pacien
cupa es el sentimiento que usted tiene de te contiene una doble constatación: por una
ser demasiado dependiente de su novio, y parte, responde al sentimiento positivo de la
que hay momentos en que usted no aprueba paciente (esta puede dominar sus reaccio
eso de ninguna manera. Esto provoca en nes) y, por otra, a su sentimiento negativo
usted una especie de confusión». mediante las palabras: «Le parece que usted
Paciente: «Sí, he tratado de no dejarme no puede hacer gran cosa» (nivel 4 según la
inquietar por eso. Ahora parece que eso escala de Carkhuff).
ya no me preocupa tanto, salvo cuando
Constatamos también que, sin duda,
me encuentro muy cansada; sin embargo,
hay momentos en los que me siento muy
durante la entrevista la paciente se ha ido
irritada. No puedo dejar de pensar cómo habituando a las respuestas del profesional,
será la situación una vez casados». siempre en consonancia con sus expresiones
Profesional: «Hay momentos en los que y sentimientos. Ha comenzado a reaccionar
usted se controla y no deja que ese senti- a las respuestas de este, se ha dado cuenta de
miento la inquiete. Pero hay otros en los que no era ese verdaderamente el camino y
que usted cree no poder hacer gran cosa». ha buscado términos que pudieran convenir
Paciente: «Sí, efectivamente, veo que yo mejor a sus vivencias, pero finalmente, al
no puedo hacer gran cosa. Y, por tanto, den- fracasar en esto, le pregunta al profesional
tro de mí tengo el sentimiento de que algo
qué es lo que le ha querido decir.
puedo hacer. Comienzo a preguntarme si no
habrá algo que yo pueda hacer… No veo
Esta reacción confusa de resistencia se
claramente lo que usted intenta decirme. produce a menudo cuando el profesional
¿Qué es lo que usted quiere decirme con ha sobreestimado o ha interpretado mal lo
eso?». expuesto por la paciente.
Profesional: «Cuando le invade esa es- Puede suceder que el profesional mani
pecie de irritación ante la idea de que usted fieste con un gesto, o con un sí, que está de
es demasiado dependiente de su novio, acuerdo con lo que dice la paciente. A con
usted comienza a preguntarse: ¿acaso no tinuación se produce un silencio, seguido de
será peor una vez que estemos casados?». un «pero…» que introduce, bien sea una serie
Paciente: «Mmm, sí… evidentemente, de condiciones que modifican la respuesta,
a veces eso me preocupa muchísimo… [si-
lencio]».
bien una serie de diferencias con lo que ha
Profesional: «¿Usted tiene conciencia dicho la paciente, o bien una observación en
de esto?». la que el profesional se muestra claramente
Paciente: «Ya lo creo, estoy convencida en contradicción con la paciente.
de que esto es lo que más me preocupa de ¿Qué puede hacer entonces el profesio
mi relación con mi novio, es decir, qué es nal? En el ejemplo anterior observamos que
lo que va a pasar una vez estemos casados. el profesional «reconoce» su error y la resis
Pues soy consciente que si no hay diálogo tencia de la paciente. Con calma, le refleja lo
y amor entre nosotros… Yo creo que sola- que la paciente ha dicho, pero describiendo
mente puede haber un buen matrimonio un sentimiento más conforme con la realidad
cuando se ama verdaderamente a alguien».
Profesional: «Ese sentimiento de ser de-
y menos amenazante. No se trata de un caso
pendiente de alguien y de estar irritada… desesperado, sino de una situación incierta:
Me parece que cada vez usted es más cons- «Usted se pregunta si, una vez casados, la
ciente de esto, y eso mismo le hace ver el situación será aún peor».
peligro que puede representar en su futura Con una breve duda, la paciente ha
vida de matrimonio». aceptado esta versión. Una buena réplica
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 209
por parte del profesional restablece el curso la palabra «todavía» con el fin de explicar
del diálogo. lo que quiere decir y comprender lo que se
A veces el profesional no percibe el esconde detrás.
error que acaba de cometer. Es cierto que no La explicitación tiene por objetivo poner
siempre se puede acertar, como en el caso del de relieve sentimientos y las actitudes que
ejemplo. En estos casos es mejor que diga no aparecen directamente en las palabras
al paciente: del sujeto, pero que pueden deducirse de la
comunicación o de su contexto.
«Lo siento mucho, pero pienso que hay
El uso de la explicitación ejerce con
algo que se me ha escapado de lo que frecuencia un atractivo más pronunciado
me ha dicho. ¿No le importaría hablarme que otras formas de reflejo, pero esta es
un poco más de todo lo que me acaba de susceptible de fomentar las tendencias a
decir… de lo que usted ha experimentado la dependencia o la transferencia. Por su
exactamente…?» proximidad a la interpretación, la explicita
ción es un tipo de respuesta menos «neutra»
También debe aceptar la reacción del que las otras formas de reflejo, más suscepti
otro: ble de contener elementos extraños al campo
de la percepción y, por este motivo, afectar
al sujeto de forma amenazante. Por ejemplo:
«No he sido comprendido»,
y de esta manera se da una nueva posibi (Un hombre de unos cincuenta años que
lidad de examinar la actitud de base. Puede presenta alcoholismo.)
decir incluso: Paciente: «Debo ir la próxima semana
a la cura del hospital, pero no me gustaría
ir… Tengo miedo… [silencio]».
«Quizá no he comprendido lo que usted Profesional (Con un tono de demanda):
quería decirme. No veo muy claramente.» «¿Usted tiene miedo a la cura?».
Paciente: «Sí, ¿sabe usted? Yo ya visité
La paciente puede entonces repetir, o ese servicio del hospital hace algunos días.
simplemente continuar explicando sus senti Los del centro de salud me han enviado de
mientos; de todas maneras aceptará de buena nuevo allí. Había muchos tipos borrachos en
gana la «excusa» del profesional y de nuevo la unidad donde me han dicho que debo ir.
Se bebían un litro de aguardiente cada día,
podrá restablecerse el diálogo sobre una base
otras veces… ¡Uf! Yo, yo no bebo alcohol
de comprensión. Cada vez que el profesional fuerte… solamente de vez en cuando alguna
se siente confundido, lo mejor es que se lo cerveza. Yo no me siento como un alcohó-
exprese al paciente: ambos podrán hacer lico… [silencio]. Me pregunto por qué me
frente a esta dificultad. quieren enviar allí. No, no, yo creo que no
iré. Yo no los necesito para poder desenvol-
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210 SECCIÓN | III La relación de ayuda
Paciente (silencio): «¡Uf!, sí, usted tiene de este último. Al entrar en los detalles de
razón… Voy a serle franco. Yo soy alcohó- los planes y de lo que espera el paciente,
lico crónico… Hace ya algunas semanas este toma conciencia del rol activo que ha
que me he emborrachado a fondo y me he
de desempeñar en la determinación de sus
puesto enfermo. Y evidentemente eso me
crea cada vez más problemas en el trabajo.
experiencias y su futuro. Por el contrario, con
Mi mujer me ha abandonado a causa de generalizaciones se corre el peligro de vivir
eso… Mi médico, que es verdaderamente con la impresión de que la vida del paciente
formidable, me ha dicho: “Cristóbal, tú vas es un puro juego de «azar» y que no es res
a hacer una cura de desintoxicación en el ponsable de lo que le acontece.
hospital. Dentro de tres semanas tendrás Los malentendidos que se producen
plaza en él”. Y bien, yo he estado allí y he durante la relación se deben, a menudo,
visto lo que era aquello… El profesional a la ambigüedad de las respuestas del
me dijo que llevara pijamas, toallas y cal- profesional.
cetines. ¿Puede usted decirme por qué yo
Una respuesta imprecisa incita al pa
debo llevar eso?».
Profesional: «Posiblemente, ellos deseen
ciente a proseguir su exploración de manera
saber si el paciente tiene sus cosas en orden más indirecta o a «inventar» explicaciones
o si ya se encuentra demasiado degradado. carentes, muchísimas veces, de validez.
Es frecuente en el caso de algunas personas En ocasiones, los profesionales se vuel
que sufren de alcoholismo». ven evasivos y poco precisos cuando ciertas
Paciente: «¿Degradado…? ¿Yo…? No, preguntas del paciente les producen ansiedad.
no, ¿sabe usted?… No he llegado todavía Los pacientes que exigen perfección, a
a ese punto. Mi jefe me guarda el trabajo. sí mismos y a los demás, suelen resistirse
Me ha dicho que es necesario que haga al requerimiento de precisión, por miedo a
algo… [silencio y suspiros]. Y bien, amable
que esta sea la causa de su malestar, de su
profesional, usted me ha quitado un poco el
miedo. Bueno, entonces iré… Posiblemente
culpabilidad o ansiedad.
mi mujer venga también. Ella me ha dicho El profesional tratará de vencer las resis
que si dejo de beber, volverá conmigo». tencias del paciente ayudándole a que precise
cuando le presente situaciones tales como:
¿Qué quiere el paciente? Tiene miedo y 1. Nadie es perfecto y, como usted sabe, la
quiere hablar con alguien con la esperanza perfección no existe en este mundo.
de reducir un poco su miedo. Pero, en primer 2. Usted es humano y sabe bien que errar es
lugar, pone a prueba al profesional para más de humanos.
tarde, una vez adquirida la confianza, pasar a 3. Es imposible ser siempre bueno, amable
exponer su propia demanda. y generoso. Tratar de ser perfectos es
En el caso presente, el paciente intentaba quemar energía y sacrificar su verdadera
—tal vez inconscientemente— que le confir identidad.
maran que su problema de alcoholismo no 4. A menudo nos motivan pensamientos o
era tan grave como creía. sentimientos inconscientes: aprendiendo
La profesional ayuda al paciente a ex a reconocerlos llegaremos mejor a poder
plicitarlo, y las informaciones que le ofrece dirigir nuestra vida y nos sentiremos me
de vez en cuando le facilitan que, al final de nos a merced de las circunstancias.
la conversación, pueda evaluar mejor su 5. El malestar que acompaña el descubri
situación social y extraer las eventuales miento de sí mismo no es más que tem
consecuencias. Esta entrevista ha ayudado poral; este deja pronto el paso a senti
al paciente a tomar una decisión importante. mientos más agradables.
6. Las emociones no son más que emocio
La precisión nes, no son hechos…
La resolución del problema exige del profe Ante todas estas afirmaciones un tanto gene
sional y del paciente que aborden en térmi ralizadas, conviene que el profesional ayude
nos claros y precisos la cuestión del futuro al paciente a personalizar diciéndole, por
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 211
ejemplo: «¿Podía usted decirme, de forma fin de ser eficaz, la respuesta del profesional
concreta, a qué se refiere con esa frase? deberá reflejarle la toma de conciencia y las
¿Cómo se siente al decirme esto?». Con esta nuevas elecciones del paciente. Sin embargo,
apreciación ayudará al paciente a persona el profesional, para no dispersarse, solamente
lizar y a no evadirse con frases un tanto es deberá retener lo esencial de las numerosas
tereotipadas. circunstancias ofrecidas por el paciente, con
el fin de dar a este un cuadro preciso de la
Escala de Carkhuff para medir nueva comprensión del problema que ha
la concreción, la precisión adquirido.
y la especificidad, que puede servir En este estadio, en el que el paciente pone
de guía al profesional en orden nuevas comprensiones de sí mismo,
Nivel 1. El profesional permite generalizacio el profesional, durante los segundos de los
nes abstractas; no se esfuerza por canalizar que dispone para responder al paciente, debe
la comunicación hacia el terreno de los sen estar atento y sensible a todos los sentimien
timientos y las situaciones específicamente tos y las actitudes de este a fin de reflejárselas
personales. sin que nada se le escape.
Nivel 2. Permite tratar los problemas per Una vez que el paciente ha expresado una
sonales de manera vaga sin llegar a esclarecer larga serie de tomas de conciencia, es bueno
los sentimientos más pertinentes. y necesario que el profesional las resuma y
Nivel 3. Centra la entrevista sobre los las relacione entre sí. Esto equivale a encajar
problemas personales, pero no trata los as «las piezas» que el paciente ha facilitado de
pectos del problema de forma concreta. manera desordenada. Es como juntar las
Nivel 4. Ayuda al paciente a desarrollar piezas de un puzzle. Esta síntesis hecha por
en términos concretos y específicos todos los el profesional tiene un gran valor, dado que
aspectos del problema. une los datos que ha ido dando el paciente
Nivel 5. Ayuda al paciente a abordar sus poco a poco. Esta síntesis, este «puzzle»,
experiencias, problemas y sentimientos de tiene un efecto de shock para el paciente.
manera auténtica y específica. Sin embargo, no debe ser demasiado largo o
demasiado rico por parte del profesional, ya
que detendría el curso de la entrevista. Estas
Respuestas que resumen respuestas de síntesis exigen una atención
muy viva, una escucha muy activa y centrada
Las respuestas-reflejo que hemos visto en en lo esencial. De esta manera el sujeto ve
la segunda fase no son siempre suficientes, aparecer un sentido nuevo en medio de su
aunque no negamos que ayudan mucho y subjetividad, encontrándose él en el centro
dan muy buenos resultados. En efecto, el de esta significación.
feedback ayuda a centrar al paciente sobre El resumen pone el énfasis sobre lo esen
el problema que se está abordando, sirve de cial de la subjetividad del paciente (lo que
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«espejo» al paciente y permite una reflexión experimenta como tal y en lo que puede re
más objetivada. El feedback ayuda al pa conocerse) pero no llegaba a poder expresar
ciente a reconocerse en lo que está diciendo. de manera clara y tan evidente.
Esto produce un impacto reflexivo que le El resumen puede aparecer como una
hace tomar conciencia clara de sí mismo y especie de interpretación pero menos ame
le asegura que su interlocutor le ha escuchado nazante, pues es el paciente quien ha pro
y comprendido. porcionado todos los elementos que el pro
A medida que la entrevista progresa, la fesional ha ido juntando. No hay, por tanto,
persona se comprende más profundamente interpretación, sino un descubrimiento de lo
y va ampliando su campo de conciencia. esencial que estaba implícito.
El panorama que presenta de su vida, tanto Es como entrenar al paciente a que ex
pasada como futura, se va descomponiendo plicite lo que antes ha dicho, partiendo de
en elementos cada vez más complejos. Con el esta nueva visión que tiene del problema.
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212 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 213
El paciente comienza a relacionar, poco a que esto comenzó no he podido saber por
poco, estos comportamientos con los aconte qué estoy así exactamente».
cimientos de su vida, pasada y presente, y a Profesional: «En el fondo, usted no sabe
si le va mejor o no. Usted todavía tiene
evocar a otras personas, otras actitudes, otros
inquietudes con respecto al tema del ma-
problemas que ahora le parecen, de forma trimonio con su novio, y se siente colérica».
más diáfana, que guardan relación. Paciente: «Hay momentos en los que
Todo esto que hemos ya señalado nos todo me desagrada. Por momentos yo no sé
hace pensar, como hemos dicho, «en el lo que quiero. Quiero decir que he tenido
ensamblaje de un puzzle». Al principio, se momentos así. Pero no sé por qué».
examina con perseverancia y concentración Profesional: «Con frecuencia usted ex-
cada motivo, y se observan las figuras. Pro perimenta que le desagrada todo, pero lo
gresivamente, apreciamos cómo cada uno de observa precisamente en este momento y
los actos del paciente se ensambla con otros dice que no sabe por qué».
Paciente: «Es cierto… [gran suspiro
para poder formar imágenes diferentes.
y silencio]. No sé qué pensar de mí. No
Cuando en una exposición dos o más fac quiero molestar. Yo me pregunto cuál ha
tores se relacionan, el profesional propone sido su reacción cuando le he pedido que
una respuesta «integral». En este caso no hable conmigo».
se contenta con reflejar los sentimientos ex Profesional: «Me parece que usted no
presados: retoma con precisión los factores está segura de cuál es su papel en la rela-
que la persona ha puesto a la luz y que pa ción conmigo. Parece que usted no tiene
recen relacionar estos sentimientos entre sí, claro de qué quiere hablar conmigo».
o relacionar las causas más fundamentales. Paciente: «Sí, creo que sí. Hace un mo-
De aquí se seguirá que el paciente perciba mento le había dicho que había leído un
libro de psicología sobre la pareja que al-
mejor la ineficacia de ciertos medios que
guien me había prestado. Pero creo que
emplea y comprenda mejor, aprecie más, eso no ha hecho más que empeorar mi
ciertos elementos de su situación (lo que es situación».
problema suyo y lo que es problema de los Profesional: «Usted tiene la impresión
demás). de que eso no la ha ayudado a aclarar sus
ideas sino que, por el contrario, la ha con-
Respuestas que favorecen fundido aún más».
Paciente: «Sí, yo creo que eso me ha
la autonomía confundido un poco más».
Por ejemplo:
Como acabamos de ver, el profesional de
ja la responsabilidad del diálogo a la paciente.
Paciente: «Y bien, yo le hablé anteayer del
No pregunta tal como lo haría en una conver
problema de mi matrimonio con mi novio».
Profesional: «Ah, sí, ya veo [silencio], sación ordinaria. La entrevista comienza con
y… ¿cómo le va?». una situación abierta: la paciente dice que
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214 SECCIÓN | III La relación de ayuda
La paciente se siente colérica contra con la autoridad, o contra otro. A medida que
todos, incluido su novio, porque querría pueda descargar su tensión en el profesional
ser capaz de decidir por ella misma. Si el estará más capacitada para proyectar claridad
profesional la hubiera apoyado, la entrevista sobre los elementos de su situación, y verá
habría podido convertirse en una relación de poco a poco la necesidad de la autoridad.
dependencia, que sin duda habría llevado a la Al aprender a reconocer y a dominar sus
paciente a oponerse al profesional. emociones, ella llegará a aceptar sus límites
Otra situación que se presenta con fre y sus reglas.
cuencia en las entrevistas de ayuda es la
siguiente: el paciente aporta una serie de
Ayudar al paciente a asumir
elementos que sopesa juiciosamente, sin
saber qué decidir. Nos parece más eficaz sus responsabilidades
que el profesional no intente valorar uno u Es frecuente que el paciente considere la
otro, o decidir por el paciente, aunque sí deba responsabilidad de estudiar sus problemas
intentar reflejar con calma o tranquilamente y de tomar decisiones autónomas como
los dos aspectos de su conflicto. Por ejemplo, algo que le produce gran sufrimiento y es
el profesional podrá decirle: fuerzo. A partir de una actitud de inseguri
dad, defensiva y dependiente de la opinión
de otro, necesitará llegar a la convicción de
«Me parece que usted no sabe qué hacer, o
que debe resolver los problemas por sí
por qué camino optar.»
mismo.
Las respuestas del profesional deben
Refleja así el conflicto tal como la per reconocer y clarificar la lucha que siente el
sona lo siente y, poco a poco, será necesaria paciente entre las expresiones de conflicto y
una dirección en la medida en que el pa el deseo de alcanzar una autonomía de jui
ciente continúe autoexplorándose. Gene cio y acción, por una parte, y el miedo y la
ralmente, si el profesional se esfuerza en inseguridad, por otra: solo así el profesional
orientarle en una determinada dirección, el reflejará al paciente el sentimiento de que le
paciente se sentirá dirigido, se defenderá ha comprendido y aceptado.
ante esto y elegirá la dirección contraria, o Sin embargo, esta fase es muy delicada,
bien aceptará pasivamente lo que le dice el el profesional deberá reflexionar bien lo que
profesional. le dice al paciente. Dado el estado de inquie
Puesto que estos conflictos están cen tud de este último, podría ser peligroso que
trados sobre acontecimientos personales, es el profesional incrementase los sentimientos
evidente que el paciente está mejor informa expresados por el paciente. Por otra parte, el
do y posee más datos sobre el tema que el paciente buscará con frecuencia apoyarse en
profesional. Pero como en este momento de el profesional e intentará de forma abierta
la entrevista el paciente aún está sometido o cerrada que este le dé su opinión acerca
a una fuerte tensión emotiva, sus aspira de alguna cuestión personal. Sabiendo que
ciones positivas posiblemente no se habrán eso no hará más que crear dependencia, el
consolidado y reincidirá con rapidez en sus profesional lo evitará. Pero el profesional
posiciones negativas. no debe confrontar al paciente con sus res
En una entrevista «centrada en el pa ponsabilidades de manera brusca o brutal
ciente» se intenta presionar el juicio de la porque esto perturbaría sensiblemente la
persona: se parte de la hipótesis de que ella relación.
sabe cuáles son sus responsabilidades y de
beres, y que las evaluará en su justa medida Respuestas de aprobación
cuando, con la ayuda del profesional, pueda
hacerlo con calma. El profesional no ayuda al paciente mostrán
Ocurre también que cuando la persona dose de acuerdo con él sin tener elementos,
demanda ayuda se encuentra en conflicto pues el paciente no siempre está de acuerdo
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 215
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216 SECCIÓN | III La relación de ayuda
9. Si el paciente tiene una visión distorsio manifiesta una excusa para terminar la en
nada de la realidad, una tarea importante trevista. Por ejemplo:
del profesional es darle información o
las explicaciones necesarias para que
«Perdone, me siento cansado, y preferiría
pueda ver su problema desde otra pers quedarme solo»; «¿Sabe?, todo el mundo
pectiva. Esto implica que el profesional tiene problemas, ya le llamaré otra vez si lo
cuente con una buena formación sobre la necesito»; «Creo que usted me ha ayudado
relación de ayuda y comunicación y que mucho, podemos dejarlo por el momento,
le ayude en todo momento a reencua muchísimas gracias», etc.
drar la situación o la forma de ver el
problema.
Hostilidad, agresividad. Entendemos la hos
ACTITUDES QUE PUEDE tilidad como la reacción emocional del paciente
MANIFESTAR EL PACIENTE ANTE ante una amenaza o una frustración de carácter
LA CONFRONTACIÓN verbal o no verbal. Esta permite tranquilizar o
poner en marcha los mecanismos de defensa
La actitud ideal del paciente, durante esta
para luchar contra la ansiedad y contra las dife
tercera fase de la relación, debería ser la de
rentes tensiones implicadas en el fenómeno. La
una sincera colaboración con el profesional.
hostilidad en la relación profesional-paciente
El paciente debería adoptar una actitud de
aparece de la siguiente forma:
autoexploración, no defensiva, frente a las
diferentes confrontaciones presentadas por 1. El profesional confronta al paciente so
el profesional. bre un punto muy amenazante para él, lo
Reconocer su parte de responsabilidad cual desencadena una frustración o una
en la persistencia o no de su problema es una amenaza en este último.
tarea que a veces resulta muy amenazadora 2. La ansiedad aparece, acompañada de sen
para el paciente. timientos de incapacidad o impotencia.
Su principal objetivo durante esta fase 3. El paciente, para afrontarlo, manifies
consiste en reconocerse como el protagonista ta agresividad verbal o motriz (p. ej.,
y el responsable de su vida y de cuanto le golpeando la mesa o la cama); esto le
ocurre. ayudará a disminuir la ansiedad.
En este caso concreto, la agresividad se diri
Ser responsable de sí mismo ge hacia la destrucción de un objeto percibi
Constatamos que todas las terapias tienen un do como una fuente de frustración o realmente
punto en común: mostrar al individuo que de como una amenaza.
be asumir su propia vida con responsabilidad. El profesional es con frecuencia el blanco
Ser responsable es tomar conciencia de la agresividad del paciente, de los comen
de que cada uno es el creador de su propio tarios o los insultos verbales u hostiles de es
destino, de su propia ontología, de sus sen te. Cuando esto ocurre, el profesional puede
timientos, situaciones, e incluso, en ciertos utilizar las siguientes estrategias:
casos, de su propio sufrimiento o desgracia. 1. Proseguir, no abandonar el contacto con
El paciente, cuando se siente confrontado el paciente. No responder con agresividad
con lo que acabamos de decir, tiende a utili a la agresividad (recordemos lo que ya
zar diferentes mecanismos de defensa. hemos dicho de transferencia y contra
transferencia).
Mecanismos de defensa frente 2. La exploración de la amenaza o de la
frustración que ha precedido a la mani
a la confrontación
festación de hostilidad.
Huir o rechazar el continuar la entrevista. 3. Permitir al paciente que verbalice los
Con frecuencia, en esta tercera fase el paciente sentimientos asociados a la amenaza
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 217
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218 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 12 Tercera fase de la relación de ayuda 219
El profesional puede enfrentarse a este Uno de sus lemas es: vive aquí y aho
comportamiento del paciente de diferentes ra lo que estás viviendo (haciendo,
formas: sintiendo, pensando…) con responsabi
1. En primer lugar, debe fijar límites claros, lidad. Mientras estás en esta tarea, estás
firmes, precisos y consistentes al percibir en ella con todos tus sentidos; cuando pa
estas formas de dependencia excesiva. ses a otra, estarás con los cinco sentidos
2. En segundo lugar, el profesional debe en la otra.
2. El análisis transaccional que ayuda a
poner el énfasis en la voluntad del pacien
confrontar al paciente analizando temas
te y su responsabilidad para asumir sus
como:
comportamientos, sus pensamientos y
a. Los escenarios de vida: el guión de
sus emociones. Evitará guiar al paciente,
vida, en el que cada uno desempeña
tomar decisiones que le conciernan; es
mos un papel en este «Gran Teatro
decir, evitará asumir la responsabilidad
del Mundo», pero que podemos y
del comportamiento del paciente.
muchas veces debemos cambiar de
papel.
Víctima inocente. Podemos comprender
b. Los mensajes parentales.
este mecanismo en el sentido ya mencionado;
c. La estructura de la personalidad: los
es decir, el paciente se considera víctima de
tres estados del Yo.
las circunstancias exteriores que escapan a
d. La importancia de las estimulaciones
su control: «Es el destino», «Es la voluntad
o «caricias».
de Dios», etc.
e. Las transacciones o interacciones en
En otros casos, las personas provocan
la comunicación.
ellas mismas estos sentimientos de víctima
f. Los juegos psicológicos, el triángulo
inocente como un mal menor para salvar una
de Karpmann, etc.
situación conflictiva, por ejemplo: salvar su
3. La programación neurolinguística.
vida de pareja, de familia, etc.
Bandler y Grinder (1980) nos muestran
A menudo pueden aparecer enfermeda
en sus escritos que muchos conflictos
des psicosomáticas como una manera in
son el resultado de una distorsión de la
consciente de eludir su responsabilidad. No
realidad: «El mapa no es la realidad».
pueden seguir con un compromiso (p. ej., un
La relación de ayuda consiste en mos
trabajo, una carrera) porque están enfermos
trar que hay diferentes formas de ver o
y, claro, no es «culpa suya, ellos querrían,
«leer» la realidad, y que conviene evitar
pero no pueden».
las generalizaciones, distorsiones, elimi
naciones, etc. (Sobre este tema hemos
Conformidad automática. Este mecanis
hablado bastante en el primer capítulo
mo es utilizado por E. Fromm (1976) para
de este libro.)
identificar a los individuos que desean evitar
4. La terapia racional emotiva de A. Ellis
la libertad y la responsabilidad de sus actos.
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220 SECCIÓN | III La relación de ayuda
problemas sobre todo en las situaciones diferentes escalas que hemos ido viendo
«límite» mediante el descubrimiento a través de los capítulos de este libro.
del sentido de la vida. Esta visión te 7. La psicoterapia existencial de Y. de
rapéutica es muy recomendada en las Yalom (1980). En su libro Psicoterapia
situaciones límite: enfermedad, muerte, existencial (1980), este autor nos ofrece
ausencia de sentido de la vida, ideas de ideas claras para confrontar a la persona
suicidio, etc. frente a problemas tan importantes sobre
6. La terapia de R. Carkhuff (1993). Nos los que se cuestiona como la libertad y la
ayuda a confrontar a la persona de forma responsabilidad, la soledad, el sentido de
progresiva y sistemática. Por ejemplo, las la vida y la muerte.
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Capítulo 13
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222 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 13 Cuarta fase de la relación de ayuda 223
con el fin de poder planificar bien, inter El diagnóstico nos ha permitido, de una for
venir y evaluar. ma clara y sintética, ubicar al paciente en su
problemática.
Ventajas del diagnóstico Incluso aunque el análisis y la clarifica
1. Reforzar el proceso establecido en la re ción del problema sean ya el comienzo de su
lación de ayuda. El diagnóstico identifica resolución, estimamos que el paciente debe
las modificaciones del estado del paciente formular de forma más clara dónde quiere
a partir de la información ofrecida por llegar; qué objetivo u objetivos se propone
este y orienta las intervenciones del pro para resolver su problema.
fesional.
2. Consolida un gran número de informa Definir el objetivo
ciones en enunciados concisos, incluidos Un objetivo para el profesional es un resul
los parámetros de interpretación de las tado esperado en función del cual se pasa a
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224 SECCIÓN | III La relación de ayuda
la acción; es el fin que espera alcanzar por d. No es muy costoso; debe haber una
el paciente; una modificación del estado de proporción entre el problema y el
salud o de comportamiento. Se trata de for coste de su solución.
mular los objetivos en términos concretos en e. Es adecuado al problema que preten
función del resultado esperado. de resolver.
Lógicamente, los objetivos, siempre que 4. Los objetivos deben ser concretos y espe
sea posible, deben planificarse con el pacien cíficos. Es decir, expresados en términos
te y no por o para el paciente. del resultado deseado en relación con un
elemento de la situación. Un objetivo no
Objetivo global concreto y específico solo es una buena
El objetivo global es el resultado esperado, es intención.
el enunciado de lo que el paciente, ayudado
por el profesional, desea o espera de forma El paciente debe estar motivado
realista conseguir. para conseguir sus objetivos
Hay una relación entre el grado de motiva
El objetivo debe ser personalizado ción y el éxito en la consecución del objetivo
El paciente debe expresar de forma clara, fijado.
concreta y específica lo que desea hacer para Entre los factores que ayudan o condicio
resolver su problema. nan la motivación, señalamos:
Algunas consignas para 1. La esperanza de conseguirlo.
una personalización de los objetivos 2. El miedo al fracaso.
3. Las experiencias del sujeto en el área que
1. Debe pertenecer al paciente. Este debe desea resolver.
descubrirlo —a veces con la ayuda del 4. Las dificultades de las pruebas que deba
profesional— y asumirlo como impor superar.
tante y necesario para resolver su situa 5. Los valores y la ética del sujeto, etc.
ción. Este debe responder a sus nece
sidades, mentalidad y circunstancias. El paciente no debe elegir objetivos demasia
El paciente debe comprometerse y res do elevados ni demasiado fáciles: pues «en
ponsabilizarse de su cumplimiento. El el término medio reside la virtud». Si son
profesional debe respetar los valores y demasiado elevados, se corre demasiado ries
ética del paciente. go de fracaso (y, por consiguiente, el paciente
2. Debe ser conciso. Es decir, expuesto en puede justificarse). Si son demasiado fáciles,
términos breves, claros y que no pueda existe el riesgo de disminuir la autoestima
ser interpretado de diferentes formas. El del paciente debido a la facilidad de la tarea.
profesional puede ayudar al paciente a Generalmente, la persona se siente moti
ser conciso en su objetivo; un objeti vada para la consecución de un objetivo fijado
vo definido de forma vaga no será reali si este implica un cierto grado de dificultad,
zable. teniendo en cuenta sus capacidades; también
3. Debe ser realista y realizable. Un ob influye el creer que lo puede conseguir.
jetivo personalizado debe establecerse
en términos comprensivos y adaptados a Establecer objetivos operativos
la naturaleza y energía del paciente. Un Definir con claridad el cambio que se desea
objetivo es realista si: conseguir lleva consigo la exigencia implí
a. El paciente dispone de los recursos cita de un objetivo definido concretamente
necesarios para cumplirlo. y realizado de forma práctica. Por esto se
b. Las circunstancias externas no impi debe intentar proteger al sujeto que busca
den su realización. sinceramente una solución. He aquí lo que
c. Este objetivo está bajo control del pa dice P. Watzlawick (1992): «Muchas per
ciente; este será entonces responsable sonas que buscan ayuda con respecto a un
del éxito o del fracaso. problema describen el cambio deseado en
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Capítulo | 13 Cuarta fase de la relación de ayuda 225
términos al parecer plenos de sentido, pero d. Estar atento a todos los eslabones de
en realidad carentes de utilidad práctica: la cadena que conducen a la consecu
desean ser más felices o comunicar mejor ción del objetivo.
con sus cónyuges, sacar más provecho de la
vida, preocuparse menos, etc. Pero es la gran Cualidades de una buena formulación
vaguedad de sus metas lo que hace imposible de los objetivos
alcanzarlas. Si se les insiste en que especifi Claridad en la formulación
quen aquello que quieren que les suceda (o 1. Indicar el resultado que se espera con
les deje de suceder) para ser más felices o un verbo que exprese una acción obser
para comunicarse mejor, etc., se sienten con vable.
frecuencia desorientados. Esta desorientación 2. Concretar las circunstancias en las que
no se debe, en primer término, al hecho de quiere conseguir el objetivo (cuándo,
que sencillamente no hayan encontrado aún dónde, cómo, con quién, de qué mane
la respuesta correcta a su problema, sino más ra, etc.).
bien a que, sobre todo, están planteando una 3. La realización de cada objetivo presenta
cuestión equivocada. Como ya afirmó Witt un cierto número de dificultades; es ne
genstein hace medio siglo, “Si una respuesta cesario enumerar el número de veces que
no puede ser expresada, tampoco puede serlo debe obtenerse un resultado.
la correspondiente pregunta”. No solamente
buscamos “la buena pregunta” y definimos de Posibilidad de medir los objetivos
esta manera el objetivo en términos concre específicos
tos, sino que intentamos también establecer Esta posibilidad impide cierta subjetividad; es
un límite temporal al proceso de cambio». decir, el objetivo debe ser definido de forma
Si el paciente puede proponer o aceptar clara, concreta y precisa para que el paciente
un objetivo concreto y preciso, es probable pueda constatar si lo ha conseguido o no.
que acepte también una duración limitada
del tratamiento. El objetivo debe ser expresado
1. Definición de los objetivos operativos. en términos de conducta
Llamamos objetivos operativos a la tra La definición de un objetivo es útil en la me
ducción de los objetivos globales, a veces dida en que precisa lo que el paciente debe
muy abstractos, en conductas concretas ser capaz de hacer para demostrar que ha
con las cuales es posible utilizar criterios conseguido su objetivo. Por ejemplo:
más objetivos y medibles. Un objetivo
llega a ser operativo cuando el paciente lo
concreta en términos observables y medi Objetivo global: «Aumentar mi autoes-
tima».
bles, lo que permite verificar si obtiene el Objetivo específico: «Concretar en qué
resultado previsto o no. conductas de mi vida y cómo quiero au-
2. Puntos de referencia para facilitar la mentar mi autoestima».
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226 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 13 Cuarta fase de la relación de ayuda 227
5. Las acciones no deben ser demasiado re paciente puede sentirse con mucha ansiedad
ducidas. De lo contrario, existe el riesgo o angustia.
de disminuir la autoestima del paciente, Con el fin de facilitar este paso, Egan
así como su motivación (puede sentirse (1982) propone algunas técnicas que pueden
tratado como un niño). servir de puente. Esta técnica consiste en ayu
6. Que sea razonablemente programado: Es dar al paciente a tomar conciencia de las fuerzas
decir: internas o externas que pueden ayudar o poner
a. No dejar nada a la improvisación y a en dificultad la realización del plan de acción.
la libre interpretación del paciente. 1. Identificar las fuerzas negativas. La iden
b. No perderse en pequeños detalles du tificación de los posibles obstáculos pue
rante la elaboración de las acciones o de ayudar al paciente a sobrepasarlos más
actividades. fácilmente. Estos obstáculos pueden ser:
c. No pretender hacer un programa personales, familiares, sociales, etc. El
perfecto, puesto que esto impediría paciente puede establecer una lista de las
que fuera funcional. dificultades que le impiden la realización
d. Señalar un tiempo razonable para la del programa de acciones y analizarla con
realización del plan. el profesional.
Ejecución del plan de acción 2. Identificar las fuerzas positivas. La iden
tificación de las fuerzas positivas aporta
Una vez establecido el plan de acción, es el confianza y seguridad al paciente en la
paciente el que debe ponerlo en práctica. Es ejecución del plan de acción. También
este quien toma la responsabilidad de su rea puede enumerar o hacer una lista de es
lización. tas fuerzas facilitadoras y cuantificar el
Frente a la ejecución del plan de acción, grado de intensidad.
los pacientes pueden actuar de forma dife 3. Seleccionar las fuerzas más significa
rente: tivas, tanto positivas como negativas.
1. Algunos se sienten capaces y a veces con Esta selección permitirá concentrarse en
suficiente motivación para realizarlo, dis las energías, positivas o negativas, que
ponen de los recursos personales, fami favorecen o impiden la realización del
liares, amigos u otros. plan de acción.
2. Otros, sin embargo, se sienten indeci 4. Adoptar las medidas necesarias frente
sos, tienen miedo, poca confianza en sí a estas fuerzas. Una vez establecida la
mismos y encuentran el plan demasiado selección de fuerzas consideradas signifi
difícil en el momento de la realización. cativas, el profesional ayudará al paciente
3. Un tercer grupo se sitúa entre los dos an a determinar cómo afrontarlas.
teriores. Estos se consideran capaces de la
Este análisis de fuerzas produce ciertos
realización del plan de acción, pero nece
efectos beneficiosos para el paciente. Por
sitan apoyo, al menos durante un tiempo.
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228 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 13 Cuarta fase de la relación de ayuda 229
20. Las opiniones, los puntos de vista, las flexionar antes y después de cada nueva
expectativas, así como los prejuicios acción, lo cual aumenta su autoestima.
teóricos y prácticos del paciente, tienen 2. Miedo, ansiedad y angustia. Tomar
cierto efecto sobre sus resultados. decisiones y ponerlas en práctica pro
21. El talón de Aquiles de estas inter duce en toda persona un cierto grado de
venciones es que hay que conseguir ansiedad que puede llegar a la angustia.
motivar al paciente durante el tiempo 3. Concienciarse y aceptar la nueva visión
que sea necesario para aplicar el plan de la realidad puede producir un sen
de acción. timiento de tranquilidad y disminución
22. Por último, el profesional debe resistir de la ansiedad.
la tentación de controlar, poseer o in 4. Tener menos ambivalencia, aceptación y
terpretar excesivamente y de cualquier comprensión de sí mismo y de los otros.
modo la realidad que vive el paciente. 5. Reconocer que no solamente hay pro
La actitud y los comportamientos del blemas, sino también recursos para
profesional, así como sus respuestas, poder resolverlos.
deben estar impregnados de un res 6. Salir de su aislamiento.
peto absoluto hacia la personalidad del 7. Aceptar sus emociones y sentimientos
paciente. Todo paciente debe conside sin poner en práctica los mecanismos
rarse como sagrado e inviolable en su de defensa.
intimidad. He aquí lo que da sentido a 8. Comprometerse y responsabilizarse en
su trabajo, cuya finalidad es tomar las la puesta en marcha del plan de acción.
precauciones necesarias para responder 9. Actitudes de transferencia: descontento
únicamente a todo aquello de lo que el con el profesional o consigo mismo,
paciente con toda libertad ha querido hostilidad, etc.
hacerle partícipe. 10. Dependencia excesiva del profesional,
con el fin de mantener o continuar el
El profesional está convencido de que no contacto.
debe persuadir, imponer o seducir al paciente 11. Manifestación de impotencia con la
en aspectos estrictamente personales. En la finalidad de que el profesional tome las
medida en que el profesional ayude al pa decisiones, guíe y de algún modo asuma
ciente a juzgar por sí mismo, la entrevista la responsabilidad del comportamiento
consigue su objetivo. del paciente.
Así, todo el esfuerzo y el arte del profe 12. Motivación para implicarse en el pro
sional deben emplearse en ayudar al paciente ceso de cambio.
a progresar en la consecución de su objetivo 13. Actitud realista. En adelante el paciente
y actividad. será más realista en cuanto a fijar sus
objetivos y actividades, comprenderá
que probablemente los fracasos están
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Capítulo 14
INTRODUCCIÓN
Objetivos
• Saber cómo terminar una relación
Al comenzar las etapas o fases de la relación
temporal y una relación final. de ayuda decíamos que si no hay acogida no
• Tomar conciencia de las actitudes hay relación y, por tanto, no se podrán dar las
que podemos tener al terminar otras fases de esta. Ahora también decimos
la relación con el paciente. que si no ha habido acogida tampoco habrá
• Saber cómo abordar las resistencias separación. Solo sentimos tristeza ante la
que puede tener el paciente ante separación de alguien con quien hemos es
el final de la relación y separación tablecido una relación. Por tanto, si no ha
del paciente. habido relación, no hay de qué separarse, en
este caso sobra esta fase. Esto nos tiene que
cuestionar a la hora de terminar la relación.
Pues si siento indiferencia, o incluso libe
ración no porque el paciente ha resuelto su
Contenidos problema, sino porque me he librado de él,
• Etapa final de la relación de ayuda: entonces cabe que nos preguntemos: ¿qué
la separación. clase de relación de ayuda he establecido con
• Actitudes del profesional durante este paciente? ¿Realmente ha habido relación
la separación. de ayuda?
• Cómo ayudar al paciente a enfrentarse
a la separación.
• Cuando el cese de la relación proviene
del profesional. ETAPA FINAL DE LA RELACIÓN
• Actitudes del paciente ante DE AYUDA: LA SEPARACIÓN
la separación.
• Reacciones eventuales del paciente El final de toda relación o experiencia rela
ante la separación. cional engendra inevitablemente un senti
• Duelo miento de pérdida. Todos hemos experimen
tado tristeza al separarnos de los amigos o de
las personas con las cuales nos hemos sentido
a gusto. Cuanto más profunda sea la relación,
más fuerte será el sentimiento de pérdida que
«Concédele palabras a la pena… La pesadumbre podemos experimentar.
que no habla, ata nuestro agotado corazón y lo Si no ha habido acogida, no ha habido
muerde hasta romperlo.» relación, y si no hay relación, no puede haber
W. Shakespeare la fase de la separación.
© 2014. Elsevier España, S.L. Reservados todos los derechos 231
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232 SECCIÓN | III La relación de ayuda
La reacción del profesional y del pa 6. El profesional debe tener clara su autoes
ciente al llegar al final de la relación es una tima, pues si esta es pobre, existe el ries
reacción de «duelo» en la cual los síntomas go de compensarla mediante pacientes
de pérdida serán proporcionales a la impli que dependan de él, con el fin de sentirse
cación que cada uno haya tenido durante la útil e importante.
relación. 7. Si el profesional ha trabajado el proceso
La inminencia de la separación reactiva de separación de manera suficiente, po
los sentimientos de duelo que se hayan po drá ayudar bastante al paciente a limitar
dido vivir en circunstancias parecidas. No su regresión y le permitirá de este modo
debemos olvidar que, a veces, para evitar este rehacer eventualmente el funcionamiento
duelo, el profesional y sobre todo el paciente adquirido durante la relación.
no se implican en una relación profunda. 8. El efecto que se produce en el paciente
en caso de que el profesional sea capaz
ACTITUDES DEL PROFESIONAL de ayudar es:
a. No utilizar la negación u otros meca
DURANTE LA SEPARACIÓN
nismos de defensa.
1. Para el profesional, una manera de com b. Expresar de forma aceptable sus
prender las reacciones del paciente es sentimientos de culpabilidad y hos
recordar lo que ha sentido en situaciones tilidad.
parecidas. c. Tolerar la realidad de la pérdida, cons
2. El profesional también debe mostrar tituida para él como una experiencia
se crítico con respecto a sus emociones válida en el arte de la adaptación.
y comportamientos cuando se aproxima d. Resumir con el paciente los aconteci
el fin de la relación. En este momento, mientos que han jalonado la relación,
algunos profesionales muestran hostili intercambiando recuerdos y haciendo
dad y descorazonamiento y se cuestionan balance de esta. El profesional com
no solamente el valor de su trabajo, si parte con el paciente los puntos que
no también la necesidad de realizar tal ayudaron a este a enfrentarse a la
tarea. separación.
3. A veces los profesionales tienden a cri e. El profesional debe mantener, en la
ticar la calidad de la formación recibida, etapa final, actitudes que faciliten esta
la falta de supervisión, la ineficacia de y que hayan sido adoptadas a lo largo
su trabajo; cualquier razón es buena para de toda la relación: la comprensión
quejarse. empática, la precisión, la confronta
4. Hay un sentimiento fuerte de culpabi ción, la autenticidad, la inmediatez, el
lidad cuando se piensa en abandonar aquí y ahora, el respeto o aceptación
al paciente (pensamos que todavía nos incondicional, etc.
necesita, que no puede caminar sin la f. También es importante que el pro
muleta que representamos para él). El fesional pueda revelar espontánea
comportamiento del paciente (de sentirse mente sus reacciones personales y
perdido, inseguro, ansioso, etc.) puede manifestar su interés hacia lo que
aumentar esta culpabilidad, lo que hará ocurre en su relación con el paciente.
más difícil aún la tarea de finalizar esta g. En las situaciones de relación de ayu
relación. da continua, si el paciente no aborda
5. Es frecuente encontrar a pacientes que el tema por sí mismo, el profesional
intentan continuar la relación más allá del puede tomar la iniciativa al mencio
límite fijado. El profesional debe pres nar la fecha de la última entrevista,
tar atención y revisar hasta qué punto él precisar el número de entrevistas pre
ha contribuido a la dependencia y a la vistas antes de finalizar la relación y
dificultad del paciente para acabar una explicar que esto debe tener un final.
relación. Una vez abordado esto, el paciente
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Capítulo | 14 Quinta fase de la relación de ayuda: la separación 233
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234 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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236 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 14 Quinta fase de la relación de ayuda: la separación 237
van aconteciendo sentimientos de tristeza, (y esto durante los 6 u 8 meses en los que to
desánimo, que influirán en lo que piensa y davía se tienen esos sentimientos que hemos
hace durante un largo período de tiem dicho, para que poco a poco se vayan yendo
po, que es necesario vivirlo y no rehuir para y no se estanquen); si nos vienen ganas de
que no se vuelva patológico. Y así entramos llorar, pues llorar y llorar (no reprimir, pues
en la fase más importante y de mucho su si no se estanca uno en este proceso); si senti
frimiento, la de los sentimientos que vamos mos rabia, exterioricémosla bien sea diciendo
a ver a continuación. tacos, o rompiendo cosas que no sirven (no
descargar contra objetos de valor, como los
Período de la vivencia de los sentimientos muebles, puertas, televisor, portátil…), y
(tristeza, depresión, rabia, culpa…). Fase si nos sentimos culpables, pues pidámosle
aguda del duelo: dolor por la separación, perdón al ser que se ha ido. También ayuda
desinterés por el mundo, preocupación por el ir con frecuencia ante la tumba y, una vez
la imagen del muerto, incluso seudoaluci allí, llorar o hablar con el difunto. El simple
naciones; la rabia emerge y suscita angustia. hecho de exteriorizar sus sentimientos ayuda
Trabajo penoso de deshacer los lazos que a no seguir torturándose con pensamientos
continúan el vínculo con el ser amado y autodestructivos de culpabilidad. Toda esta
reconocer la ambivalencia de toda relación; serie de sentimientos e ideas no siempre se
todas las actividades del doliente pierden sig les manifiestan a los profesionales de la salud
nificado en esta fase. Va disminuyendo con por miedo a que les tratemos como personas
el tiempo, pero pueden repetirse en ocasiones con una patología grave; por ello hay que
como los aniversarios. mostrarles confianza en ellos mismos y sobre
Es un período que dura más o menos todo hacerles comprender que es muy nor
unos 6-8 meses, o incluso más, donde aflo mal y sano el que tengan estos sentimientos
ran sentimientos de tristeza, angustia, culpa, y que son duraderos —meses o años—, pero
soledad, inseguridad. Es importante que se que deben ir sacándolos o exteriorizándolos,
les haga saber a los que están viviendo el como acabamos de decir.
duelo que son sentimientos normales; la Durante este período del duelo es normal
autoinculpación es un proceso que existe en sentir algunas sensaciones físicas, como son
la fase de luto y que poco a poco pasa con el la opresión gástrica, torácica y de garganta,
tiempo. Ahora bien, es muy importante exte palpitaciones, falta de aire, dolores de es
riorizar los sentimientos, pues no solo ayuda palda, hipersensibilidad al ruido, falta de
a que la fase sea más liviana, sino también a energía, fatiga, debilidad muscular, boca
no estancarse en el duelo o a que se vuelva seca, falta de apetito, etc. Desde el punto de
patológico. vista de la percepción, pueden aparecer dudas
En esta etapa es importante ayudarles a sobre la muerte, confusión, dificultad para
comprender que todo lo que siente es normal, concentrarse, alucinaciones con sensación
que es normal su tristeza, depresión, sentir que de presencia del fallecido, temor a volverse
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nada merece la pena; que es normal sen loco, sentimientos de tristeza, ira, culpa
tir agresividad, cólera e irritabilidad; que es bilidad, autorreproche, ansiedad, soledad,
normal tener sentimientos de culpa por lo desesperanza, rabia, cólera, trastornos del
que hicieron o no hicieron en vida y durante sueño, del apetito, retiro social, búsqueda
la enfermedad con la persona fallecida. Du del fallecido, suspiros, hiperactividad sin
rante este período es muy necesario exterio descanso, visitas frecuentes al cementerio o
rizar estos sentimientos. Lo debemos hacer, lugares a los que solía ir con el fallecido (de
ya sea entre los miembros de la familia, esta manera hacen como si no se hubiera ido),
o con amigos o personas de confianza, o bien sentimientos de nostalgia exagerados… Co
con algún profesional de la salud. Si esto mo vemos, es un período largo de mucha agi
no fuera posible, dediquemos todos los días tación y sufrimiento y que hay que vivirlos y
un tiempo de al menos 10 a 30 minutos a es no reprimirlos, para así ir ventilándolos y que
cribir sobre los sentimientos que nos vienen no se queden estancados en nuestra vida, a
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238 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 14 Quinta fase de la relación de ayuda: la separación 239
Los adolescentes suelen vivir el duelo proponiéndoles a estos que tengan una aten
casi igual que los adultos; hay que ser trans ción cariñosa con el paciente para rendirle
parentes con ellos, sin olvidar que no deben una buena muerte.
asumir responsabilidades más allá de sus Antes del fallecimiento del paciente, to
posibilidades. También el grupo de amigos dos los miembros de la familia deberán rendir
puede ayudar a expresar sus sentimientos; cuentas emocionales con el que va a morir,
esto minimizará la ansiedad o la culpabilidad pedirse perdón mutuamente y manifestarse
que aparece en muchos momentos. gratitud por lo que han vivido en común.
En los padres se suele requerir un se Los profesionales pueden programar
guimiento más cercano ya que puede tener revisiones periódicas y entrevistas con los
consecuencias devastadoras. La muerte de familiares para valorar cómo llevan el duelo,
un hijo es un suceso que por norma general de este modo podemos ayudarles a mitigar
no sigue el curso de la vida: normalmente el dolor focalizándolo de tal manera que les
nuestros padres mueren antes que los hijos. hagamos ser realistas con la situación. Acom
Por tanto el duelo es largo. Hay situaciones pañándolos en su comprensión y vivencia de
en las que, en la vida de unos padres que han la muerte, podemos ayudarles mediante estas
sufrido la muerte de un hijo, nunca llegan a entrevistas a vivir el duelo, es decir, a que
superar la pérdida. Incluso el matrimonio exterioricen los sentimientos y las emociones
puede deshacerse si no se cuida este proceso reprimidas, las quejas que pudieran tener de
de duelo. En consecuencia, los profesionales todo el proceso y desenlace, tanto hacia los
o las personas que están cerca debemos cui profesionales que han tratado al difunto como
dar muy detenidamente la situación de esos hacia ellos mismos, y así evaluar, en la medida
padres, ayudándoles mediante entrevistas a de lo posible, el proceso del duelo.
expresar todos esos sentimientos. Con frecuencia suelen darse circuns
En los ancianos los sentimientos de pér tancias en las que los familiares quieran huir
dida son más sostenidos, más a largo plazo, de la situación de duelo, teniendo actitudes
básicamente porque son menos flexibles para demasiado rápidas, como la de vender la casa
ajustarse a los cambios y por el resto de los donde residieron con el fallecido, cambiar de
duelos que han ido elaborando o acumulando trabajo, irse de vacaciones, etc. De esta forma
a largo de su vida. huyen del sufrimiento que trae el duelo, pero
En la familia, cuando acontece el falleci no es la solución ya que de esta manera no
miento de uno de sus miembros principales, hacen el proceso del duelo. Algunos, al per
cada miembro lo vivirá de una manera dife der su pareja, intentan, sin haber realizado el
rente y en momentos diferentes. Por ejemplo, duelo, establecer rápidamente otra relación o
unos puede que estén viviendo sentimientos casarse; otros, tener un nuevo hijo que sus
de tristeza y otros, al mismo tiempo, de rabia; tituya al fallecido, con lo cual, al no haber
es decir, que unos no soportan que alguno es realizado el duelo, saldrán más tarde los pro
té llorando y reaccionan con agresividad, etc. blemas estancados, dando lugar a situaciones
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240 SECCIÓN | III La relación de ayuda
a nuestra autoestima, seremos capaces de las que actualmente se expresa el duelo, pues
afrontar una nueva etapa con fortaleza e esto no solo no suprime la angustia que rodea
ilusión. a la muerte, sino que también la agudiza al
condenarla a la soledad, pues la muerte no
puede ser barrida del horizonte.
Conclusiones A veces el miedo que sentimos ante la
El duelo humano se define como una re muerte también salpica a los profesionales,
acción adaptativa natural, normal y es debido a la falta de preparación del perso
perable ante la pérdida de un ser querido. nal sanitario para poder acompañar a quien
Vamos a realizar algunas consideraciones sufre y a quien va a morir. La formación
que nos parecen muy útiles tomadas de J.C. académica se orienta a técnicas y manio
Bermejo (2003) en su libro Vivir sanamente bras de gran complejidad, pero se olvida
el duelo. del entrenamiento adecuado en el abor
daje de los aspectos psicoemocionales, ig
Desocialización del duelo norando así la importancia de la presen
cia de alguien junto a la persona que sufre o
La desocialización del duelo se debe a lo que
muere.
llamamos «cultura urbana», que ha influido
en la desocialización del morir y de lo que
sigue a la muerte, impidiendo la manifes Ayudar a partir
tación de duelo que anteriormente tenía su Compartir el último tramo de vida de un
propio espacio y merecía de una conside ser querido es una experiencia cargada de
ración social, recortando así la posibilidad significado y plena de emociones.
de que se haga patente el dolor de los más Poder zanjar asuntos no resueltos, com
directamente afectados. partir sentimientos y abrir los corazones des
de el amor, favorece que la persona que se va
La necesidad de enfrentarse y expresar pueda vivir la etapa final de forma más serena
el dolor y su familia pueda iniciar de una manera más
sana la elaboración del duelo.
El dolor por la muerte de alguien ha de ha
Como profesionales, debemos contribuir
cerse elocuente, ser comunicado, compartido
y considerar varios aspectos para que tanto la
para que el dolor sea menos intenso y pueda
familia como la persona que se muere puedan
ser aceptado y asumido. Por ello debemos
elaborar de forma correcta el duelo; tales as
exteriorizar el duelo como algo esperable,
pectos son:
reconociendo lo valioso de presencias amigas
ante quienes podamos expresar el sufrimien 1. Compartir la información de manera
to, la desesperación e incluso los sentimien honesta y veraz.
tos de tristeza, rabia o culpa, pues así el dolor 2. Permitir la participación del familiar en
cede en intensidad y se amansa. los cuidados del ser querido y en la toma
El llanto es liberador y las lágrimas ali de decisiones.
vian; con ellas se expresa el vacío que deja 3. Respetar la reacción de cada uno de los
una persona querida. Estas lágrimas hay que miembros de la familia.
respetarlas, ateniéndonos a la piedad y la 4. Discutir o anticipar el evento de la
compasión. Hay que dejar que el sentimiento muerte.
aflore, que se pongan palabras a la pena y que 5. Hablar de la muerte.
brote el llanto para ayudar a reafirmar la vida. 6. Otorgar prioridad a las necesidades y
La cercanía y la escucha alivian porque evitan deseos del enfermo.
que al dolor se le una la incomunicación y la 7. Permitir el descanso.
soledad. Los hombres seguimos necesitados 8. Poder encontrar un sentido a la enfer
de ayuda para elaborar el sufrimiento que medad.
sentimos cuando perdemos a alguien querido. 9. Poder planificar un futuro sin el ser que
Debemos evitar las formas desocializadas en rido.
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Capítulo | 14 Quinta fase de la relación de ayuda: la separación 241
se, es una experiencia que levanta el ánimo. familia debe ser enfocado durante el tiempo
Las manos tienen mucho poder cuando efectivo del cuidado y después de la muer
en ellas está puesto el corazón. te. Las relaciones de apoyo entre colegas y
profesionales de la salud son importantes
El valor terapéutico de la escucha para la provisión de cuidados emocionales
Escuchar puede ser la mejor terapia en medio y físicos al paciente enfermo terminal y a la
del sufrimiento. Escuchar activamente signi familia. Las enfermeras también se valen de
fica entregar el interés sincero por el mundo estrategias reductoras del estrés. Ejemplos
ajeno, acogerlo y encontrarse en la verdad de de tales estrategias comprenden el manteni
la experiencia. miento de hábitos adecuados de salud, el ejer
Significa cargar sobre sí el peso del dolor cicio regular y las actividades recreativas. El
ajeno, facilitar el drenaje emocional del que uso de un álbum de recortes con cartas a pa
está sufriendo. cientes que han muerto en las que el cuidador
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242 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 14 Quinta fase de la relación de ayuda: la separación 243
Nos preguntamos qué objetivos debería los sentimientos normales que se van a ir
cumplir la atención primaria en la atención dando durante el mismo.
al duelo; revisando la literatura encontramos Por otra parte, si la persona ha fallecido,
una sistematización muy interesante de los visitar al difunto el primer día, despidiéndo
objetivos enfocándolos desde la perspectiva nos de él y ofreciendo nuestras condolencias
de la prevención: a la familia. Asimismo, ofreceremos a la fa
milia asesoramiento y disponibilidad.
• Prevención primaria: cuidando que la Se establecerá una primera entrevista
persona elabore su duelo de la manera
más natural y saludable posible, como (con aquellas familias que lo acepten) en
bien acabamos de señalar. la que determinaremos la periodicidad y la
duración de dichas entrevistas. Consideramos
• Prevención secundaria: detectando pre que esta entrevista es mejor realizarla en el
cozmente el duelo complicado con el
fin de establecer una terapia temprana y domicilio familiar para ser capaz de detectar
derivar a otro nivel si fuera necesario. posibles signos de alarma y facilitar en la
intimidad de la familia la expresión de los
• Prevención terciaria: asumir el segui sentimientos.
miento y soporte de personas con duelos
crónicos de años de evolución y secuelas En la literatura se llega a establecer que el
de por vida. número de estas sesiones debería establecerse
en torno a siete a lo largo de un año y que su
B. Rodríguez Vega y A. Fernández Liria prop duración estimada debería ser de entre 30 y
onen cuatro objetivos que habría que intentar 40 minutos. Es evidente que tal y como se
conseguir en toda intervención de cualquier encuentra hoy en día la atención primaria,
proceso del duelo: estas cifras pueden resultar de todo punto
1. Facilitar la aceptación de la realidad de inabordables para la enfermera de familia y
la pérdida. su equipo. No obstante, aunque nos parezca
2. Facilitar la expresión y el manejo de mucho tiempo, en el fondo es ganarlo, pues
sentimientos ligados a ella. un duelo patológico nos va a emplear más
3. Facilitar la resolución de problemas prác tiempo, y sobre todo más sufrimiento para
ticos. los familiares.
4. Facilitar la despedida y la posibilidad Las primeras sesiones se realizarán cada
de encontrar sentido y satisfacción en la 10 días y progresivamente se irán separando
vida. en el tiempo.
Los contenidos de las sesiones los mar
Para la consecución de estos objetivos, prop cará, en principio, la enfermera (recordemos
onemos, por un lado, una dinámica de actua que es una situación de crisis), la cual les
ción estructurada y una serie de técnicas de hablará y explicará de lo que es un duelo y
intervención para desarrollar. No existe una de sus fases, recalcando, principalmente, lo
guía estandarizada de actuación, pero po importante de expresar los sentimientos y no
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dría establecerse una estructuración de la guardárselos, pues es esto lo que más tarde da
siguiente forma: lugar a un duelo patológico. En una primera
La intervención en el duelo debería co fase se realizará una labor de acompañamien
menzar desde el momento en que la muerte to, facilitando el diálogo entre todos para que
se conoce, incluso desde el momento que todos expresen cómo se sienten o cómo están
sabemos que la enfermedad va a llevar a la viviendo la separación; posteriormente, en
muerte, con el fin de ir ofreciendo a la fa una segunda fase, se llevará a cabo una labor
milia un apoyo en el duelo anticipado. Es de ayuda a la elaboración del duelo.
conveniente, en el caso de que el paciente Las entrevistas se realizarán teniendo un
esté terminal, ofrecer a este, en la medida marco de mucha empatía y centrándonos en
de lo posible, y sobre todo a su familia, un que se expresen los sentimientos tanto de
espacio donde se les explique el duelo y sus tristeza (llorando), de rabia (diciendo tacos o
diversas fases, al objeto de que comprendan rompiendo cosas que no sirvan, o golpeando)
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244 SECCIÓN | III La relación de ayuda
o de culpa, escribiendo, y pidiéndole perdón juicios de valor acerca del proceso que
al fallecido, y perdonándose. estamos tratando.
Hasta aquí se han determinado unos • Ofrecer disponibilidad para que el pa
puntos básicos a seguir en los procesos del ciente acuda a nosotros cuando lo nece
duelo. A continuación se exponen una serie site.
de técnicas de intervención que deberán po • Mantener una escucha activa repetida
nerse en práctica (o al menos intentarlo) en en la que nos relaten la pérdida reitera
cada una de las entrevistas que tengamos con damente ya que esta ayuda a aceptarla.
las personas en duelo: «Hablar de la muerte alivia.»
• Ser capaz de facilitar que el doliente
• Establecer una buena relación profe exprese con la mayor libertad posible
sional con el doliente empatizando con sus sentimientos respecto al fallecido,
él, tratándolo de forma respetuosa y no alentando la exteriorización de dichos
permitiendo que en nuestra mente existan sentimientos.
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Capítulo 15
Evaluación
Luis Cibanal Juan y María del Carmen Arce Sánchez
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246 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 15 Evaluación 247
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248 SECCIÓN | III La relación de ayuda
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Capítulo | 15 Evaluación 249
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Capítulo 16
Comunicación grupal
Luis Cibanal Juan y María del Consuelo Carballal Balsa
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254 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 255
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256 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 257
4. Decisorias. Las reuniones decisorias son personas para decidir o tomar una decisión no
las que tienen como objetivo tomar una es técnicamente aconsejable, como ya se ha
decisión colegiada (tabla 16-3). La toma mencionado. Las reuniones que se convocan
de decisiones siempre es complicada y en nuestros centros difícilmente son de un tipo
compleja por dos razones: o de otro, extensivamente (informativas, con
a. La decisión debe ser de calidad y sultivas, formativas o decisorias). Sin embar
siempre se corre el riesgo de no go, siempre es necesario y conveniente que:
acertar. 1. Los miembros de una reunión conozcan
b. El proceso de la toma de decisiones perfectamente los temas que se van a
es complejo. Hay en los miembros tratar y su finalidad.
del grupo análisis distintos de la 2. Los equipos directivos procuren separar y
misma realidad, diferentes intereses, no hacer coincidir en una misma reunión
objetivos diversos, etc. diversos temas y finalidades, ya que sus
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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258 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
trabajo eficaz. En ellas se pueden tomar para informar, consultar y debatir situa
decisiones y lograr que todas las perso ciones o problemas. Es el grupo ideal
nas participen, se impliquen y colaboren. para la formación, sobre todo cuando el
Estas reuniones son propias de equipos objetivo que se persigue es el cambio de
directivos. actitudes y la formación de opiniones.
2. Reuniones de grupo mediano (de 8 a 20 Nunca son aconsejables para tomar de
miembros). Estas reuniones son útiles cisiones y llegar a acuerdos, ya que para
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 259
¿Es necesaria la reunión? licen fuera del horario del trabajo habitual
para que de esta forma los participantes no
Para considerar la necesidad o la convenien tengan que realizar cambios en actividades
cia de una reunión, el responsable del grupo programadas y para que con su ausencia no
debe analizar dos aspectos: dificulten la realización del trabajo de sus
1. Necesidad técnica: compañeros de equipo.
a. Existe necesidad de comunicar o Ciertos días y algunas horas son más
informar sobre algún aspecto de la propicios e idóneos para la convocatoria y
organización y el funcionamiento del la celebración de reuniones. Es conveniente
centro, y la reunión es el mejor cauce tener esto en cuenta, si se pretende que los
para transmitir esta información, da participantes no solamente colaboren, sino
da la importancia o la naturaleza de que incluso se muestren más creativos y par
esta. ticipativos. Aunque también cabe convocarla,
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260 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
por parte de algunos directivos, a ciertas ho dificultad para reconducir los temas,
ras en las que se sabe que van a aprobar todo puesto que en los extremos de una me
lo que se les proponga, con lo cual puede pa sa rectangular es más fácil y mayor la
recer que falta transparencia y autenticidad, sensación de control sobre los asistentes.
y a medio plazo, los participantes detectan En cuanto a la colocación de asientos,
esto, convirtiéndose las reuniones en pérdida también es importante evitar tensiones
de tiempo e insatisfacción. innecesarias, procurando que no estén en
asientos enfrentados personas o grupos
que sustentan puntos de vista contrarios.
Fase de preparación 4. A veces se pierde mucho tiempo bus
La responsabilidad de la preparación de una cando una sala.
reunión recae directamente en el conductor 5. La disposición de las sillas es importante
o coordinador y en las personas que van a y esencial. Todos los miembros deben
asistir y participar. Las buenas intenciones verse de cara.
del que convoca o dirige la reunión significan 6. Un panel debe permitir ir fijando las ideas
poco si no se ha preparado el contenido de la propuestas.
reunión convenientemente. 7. Preparar las ilustraciones, los textos
que se discutirán.
Aspectos a los que el coordinador
de una reunión debe atender Condiciones necesarias y ambiente
1. Condiciones materiales de trabajo
1. Verificación de que se han enviado y
Preparar convenientemente la sala recibido las convocatorias y se ha com
de reuniones. La realización de una reunión prendido su sentido. Además, preparar la
requiere de un entorno favorecedor del traba reunión incluye una serie de actividades
jo en equipo. Este entorno debería reunir las no relacionadas con el contenido.
siguientes características: 2. Verificación de la idoneidad del lugar en
1. Ser fácilmente accesible para todos los que ha de realizarse la reunión.
que han de participar en la reunión. 3. Realización de las gestiones necesarias
2. Ser neutral. Es necesario que el lugar en para que durante la reunión no se produz
el que se realiza la reunión no implique can interrupciones. Preparar una reunión
una ventaja obvia para ninguna de las implica, para el que la convoca, la reali
partes. zación de una serie de actividades.
3. Disponer de: espacio suficiente, mesas y a. Definir claramente el objetivo y los
sillas cómodas y medios audiovisuales temas que se van a tratar.
para realizar exposiciones orales. Ade b. Decidir quiénes van a asistir.
más, el lugar de la reunión, a ser posible, c. Decidir cuánto va a durar la reunión.
deberá estar situado en una sala de fácil d. Decidir cuándo y dónde se realizará
acceso a todos los profesionales. Estas la reunión.
condiciones son necesarias para que la e. Elaborar y distribuir la convocatoria.
reunión se realice en un ambiente cómo f. Preparar la dirección y coordinación
do. Una de las cuestiones importantes de la reunión.
a la hora de efectuar una reunión es la
colocación de las mesas y los asientos. Si Recursos materiales
lo que se pretende es fomentar el espíritu 1. Medios audiovisuales para realizar la
de equipo, la creatividad, la discusión introducción a la reunión (transparen
y la toma de decisiones consensuadas, cias, diapositivas, ordenador, pizarra…).
los asientos han de distribuirse en torno Hay que tener en cuenta que el material
a una mesa redonda o cuadrada o en audiovisual ha de servir para facilitar
forma de uve. La mesa rectangular es la comprensión de la introducción o de
útil para directores tímidos que tienen otros aspectos que se expongan durante
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 261
2. Fijación del orden del día 3. El que convoca no tenga autoridad para
y determinación de las personas convocarla.
que deben asistir
Reflexionar sobre la duración total de la
Cuestiones relativas al tiempo de prepa- sesión. Una reunión ha de durar el tiem
ración. Para estimar el tiempo necesario de po necesario para conseguir el objetivo u
preparación de una reunión pueden utilizarse objetivos propuestos. Si dura más de una
los siguientes criterios: hora es conveniente intercalar pausas de
1. Preparación y distribución de la convo diez minutos. Si dura más de dos horas
catoria. significa que se ha planteado un objetivo
2. Preparación y distribución del material demasiado ambicioso para una sesión y
que han de tener los asistentes con ante que hubiese sido preferible considerar dos
lación. o más sesiones.
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262 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 263
en los que cada miembro debe intervenir o Al acta de la reunión se pueden añadir
participar, etc. Recordemos que una sesión informes de los participantes sobre aspectos
anunciada en el último momento parte ya concretos. El acta ha de ser distribuida a los
en negativo. asistentes en un plazo de tres o cuatro días y
cada uno de ellos ha de dar su conformidad
Prever un acta de la reunión. Las actas de al contenido.
las reuniones son sumamente importantes.
Estas muestran el trabajo realizado, quiénes 3. Análisis, antes del comienzo
lo realizaron, cuándo y, sobre todo, las con de la reunión, de los posibles aspectos
clusiones o decisiones a las que llegaron. problemáticos del tema
En toda reunión debe haber un secretario, Se deben tener claros los datos esenciales,
que será el encargado de ir tomando nota de posibles problemas que se pueden plantear en
todo lo que acontece en la reunión. el transcurso de la sesión de trabajo, alterna
Es conveniente que, al principio de tivas y propuestas posibles, etc. (tabla 16-4).
la reunión, se clarifique entre los partici
pantes lo que estos piensan o creen que 4. Determinación del objetivo
es indispensable poner en el acta. Esto de la reunión
permitirá clarificar las expectativas de los La finalidad u objetivo debe indicarse en la
que consideren que toda discusión quede convocatoria con toda claridad y precisión:
reflejada (lo cual puede ser interminable),
o por el contrario, los que crean que el acta Determinar la finalidad de la reunión
solo debe reflejar las conclusiones, o las 1. Orden de urgencia de las cuestiones que
intervenciones que expresamente alguno hay que discutir.
de sus participantes quiere que consten en 2. Duración prevista para cada tema que
acta. haya que tratar.
Citamos algunos de los puntos esenciales 3. Grado de participación del grupo en cada
que debe contener toda acta: tema.
1. Personas convocadas. Estos puntos deben ser anunciados al grupo
2. Asistentes. con el fin de que este pueda prepararse y se
3. Temas tratados. le motive a asistir. Se desea también que el
4. Opiniones e ideas relevantes expresadas. grupo participe en la elección de los temas.
5. Conclusiones y decisiones tomadas.
6. Participantes que no han estado de acuer 5. Dirección y coordinación
do con las decisiones de la mayoría y los de la reunión
motivos del desacuerdo. Dirigir y coordinar una reunión tiene que ver
7. Líneas de acción y asignación de res con dos aspectos: la cultura de la organiza
ponsabilidades. ción y las cualidades de liderazgo de quien la
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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264 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
conduce. En empresas en las que predominan y el nivel del debate. La reunión que
los valores culturales de distancia jerárqui funciona es aquella en la que todos los
ca y poder, y en las que se aprecian más las participantes pueden manifestar lo que
adhesiones a una persona que la competen piensan sin temor a ser ridiculizados
cia profesional, es muy difícil que se realicen ni represaliados, sabedores de que su
reuniones en las que los asistentes tengan aportación será escuchada y tomada en
el convencimiento de que el planteamiento serio incluso por parte de quienes no
de los temas y sus propias intervenciones están de acuerdo.
vayan a ser fructíferas. En estas empresas, 6. Tolerancia con aquellos cuyo trato resulta
las reuniones no se plantean como trabajo difícil.
en equipo, aunque a veces se utilicen para 7. Imparcialidad con los amigos.
simular una participación inexistente, sino 8. Continencia para intervenir solo cuando
que son más bien una suma de individuali sea necesario reconducir la reunión. In
dades, cuando no una manifestación de poder tervenciones del tipo: «Mi opinión sobre
o una ocasión para el enfrentamiento o para este asunto es…» pueden ayudar a cen
reforzar alianzas. trar la reunión en los objetivos.
En empresas en las que predominan valo
Además, tiene que cumplir y hacer cumplir
res de calidad total y creación de valor, orien
las siguientes normas:
tación al usuario, compromiso, creatividad y
competencia profesional, las reuniones son 1. Saber escuchar y demostrar a todos los
instrumentos que facilitan la participación y participantes que se está escuchan
que se utilizan únicamente cuando son im do. Todos sabemos que estar presente y
prescindibles, o sea, cuando no es posible oír no es lo mismo que escuchar activa
resolver un asunto mediante otras formas de mente.
comunicación. 2. Admitir críticas siempre que se dirijan a
Si un responsable de unidad desea estar las ideas y no a las personas.
en sintonía o propiciar una cultura de em 3. Esforzarse por ser breve, puesto que la
presa en la que predominen los valores de reunión es para discutir, no para exponer
calidad total y creación de valor, además o hacer un discurso.
de realizar únicamente las reuniones impres 4. Procurar que se respete el tiempo asigna
cindibles, ha de dirigirlas teniendo en cuenta do a cada tema.
los siguientes principios: 5. Respetar y escuchar las propuestas y las
opiniones de los demás.
1. Reconocimiento de sus creencias y pre-
6. Llegar a conclusiones y adoptar líneas de
juicios sobre los asistentes y sobre los
acción.
temas a tratar en la reunión.
2. Sinceridad en todas sus intervenciones.
3. Respeto a los asistentes a la reunión La convocatoria de una reunión debe
prestando atención al proceso. Ciertas realizarse siempre que sea posible
actuaciones pueden considerarse una con un plazo suficiente
falta de respeto: hablar por teléfono, rea
lizar otros trabajos, firmar documentos En la convocatoria deben incluirse:
o no mirar a los participantes durante la 1. Fecha, lugar y hora de la reunión.
reunión. 2. Duración.
4. Disposición a considerar todos los puntos 3. Orden del día (tema de la reunión).
de vista y a recabar toda la información 4. Finalidades de la reunión en cada uno
que se produzca en la reunión de la forma de los puntos del orden del día.
más objetiva posible. 5. Documentación, problemas, propuestas;
5. El que dirige una reunión ha de sa todo aquello que pueda ser nuevamente
ber que de su personalidad y energía analizado y estudiado por las personas
dependerán la calidad de la discusión que van a asistir.
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 265
figurasen los datos antes mencionados. orden del día. Es decir, proponer a la
Es recomendable que cada participante asamblea si está de acuerdo en que los
tenga ante sí el orden del día. Para ello, se puntos se traten en el orden establecido
debe repartir al inicio de la reunión, junto o, por el contrario, estima que es con
a los esquemas o dossieres que el director veniente que un punto pase antes que
haya confeccionado para ser usados durante otro.
esta.
Una vez que hemos logrado situar a los
Desarrollo de la reunión
asistentes, es preceptivo realizar un saludo
o bienvenida. Resulta sumamente práctico, Actuación del moderador
si no se han reunido con anterioridad los o moderadora
mismos asistentes, aclarar una serie de pre El moderador de la reunión tiene que condu
misas que ayudarán y cooperarán para que cirla teniendo en cuenta dos planos:
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266 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 267
emitidas, así se evitarán las críticas. He 1. Las intervenciones de todas las personas
aquí algunos principios que debe regir el asistentes.
torbellino de ideas: 2. El respeto a todas las opiniones e inter
a. Pedir al grupo todas las soluciones venciones.
posibles y anotarlas; a ser posible, 3. La creación de confianza, cooperación y
en una pizarra que todos vean y que cordialidad.
puedan tener delante.
b. Animar las sugerencias atrevidas y Técnicas que se van a utilizar. Técnicas que
las soluciones originales a fin de es debe dominar el conductor de la reunión du
timular la creatividad del grupo. rante el transcurso de esta:
c. Soportar los silencios que impulsan 1. Reformulación o feedback.
al grupo a participar más activa a. ¿Qué es?: recoger una opinión, un
mente. juicio, una propuesta, una aprobación,
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268 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
etc., realizada por cualquier partici misma formulación, pidiendo que sea él
pante y reformularla de nuevo para quien responda, ya que es su responsabi
la reconsideración del grupo. lidad o conoce el tema.
b. ¿Cuándo se hace?: cuando la apor 5. Pregunta rebote: el moderador devuelve la
tación sea interesante y conveniente pregunta hecha por un participante a otro.
para la consecución de los objetivos. 6. Pregunta recuerdo: consiste en una pre
Cuando convenga tener en cuenta gunta o una cuestión planteada anterior
varias aportaciones y haya que resu mente y que quedó sin contestación.
mirlas y entresacar lo que tienen en 7. Resúmenes o síntesis parciales: conviene
común o de diferencia. hacer cada cierto tiempo un resumen de lo
c. ¿Cómo se hace? tratado, ya que de esta manera los partici
– Reflejo puro y simple: repetición pantes van teniendo presente lo abordado.
textual. Dificultades más frecuentes. Las vemos re
– Resumen: presentación de lo esen flejadas en la tabla 16-5.
cial.
– Nueva reformulación: se repite la Otras dificultades
idea con otras palabras. Dificultades ligadas al que dirige la
d. Reestimulación: consiste en animar reunión:
a la participación y a la interacción 1. Recurso al estatuto externo (a veces uno
de los asistentes en la dinámica de la se agarra a su estatuto para encontrar una
sesión de trabajo. Los integrantes del seguridad).
grupo han de mantener la atención. 2. Dificultad de los cambios de rol y el
El que dirige la reunión ha de favo miedo a tal cambio.
recer que los integrantes del grupo 3. Desconfianza hacia los grupos, pues
mantengan la atención; puede con piensan que:
seguirlo mediante la realización de a. Mata la responsabilidad.
recapitulaciones y frecuentes síntesis b. Destruye la personalidad en lo que
pertinentes. tiene de creatividad.
Procedimientos: c. Es lento.
d. Es estéril.
1. Pregunta-sondeo: tiene por objetivo defi 4. Actitudes de compensación:
nir una palabra o concepto y aclararla en a. Recurso al sistema de autoridad.
el caso de que los participantes la utilicen b. Deseo de convencer a toda costa
con significados claramente distintos. Se (huida y miedo al cambio).
utiliza también para definir una palabra c. Lucha solapada contra el grupo.
desconocida o una alusión oscura. d. Búsqueda de recetas (recular ante la
2. Invitación directa a participar: se em relación).
plea para hacer hablar o intervenir a una
persona que ha permanecido en silencio Dificultades ligadas a los participantes. Del
durante un cierto tiempo o a un partici miedo y las dificultades del líder o animador
pante que, por sus gestos, parece querer del grupo, se hacen eco las actitudes de los
intervenir. Este procedimiento conviene participantes:
emplearlo con los miembros que guardan 1. El miedo del grupo que:
silencio en las reuniones y posteriormen a. Está asociada a la idea de que es
te boicotean las decisiones o acuerdos como un gran animal que impone.
con sus palabras o actuaciones. b. Ligada al miedo de enjuiciamiento.
3. Petición de complemento: invitar a com 2. Tendencia al conformismo (la opinión
pletar puntos de vista distintos u opinio dominante actúa como un imán sobre las
nes diferentes. opiniones individuales).
4. Pregunta eco: el moderador devuelve al 3. Hay un bajón en la espontaneidad (resul
participante su propia pregunta y con su tado de lo anterior).
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 269
(Continúa)
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270 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 271
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272 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 16 Comunicación grupal 273
algunos temas puntuales, emplazar a los Santiago de Chile: Impact Media Comercia; 2009.
Harvard Busines Review. Dirigir personas en la empresa.
interesados a una entrevista particular. Bilbao: Deusto; 1999.
2. En casos conflictivos, no se deben López Fresno P, Grandes Carci M. Cómo conseguir la
dar, ni existen recetas. Suele ser efi mejor reunión y optimizar sus resultados. Madrid:
caz devolver las preguntas al grupo y AENOR. Asociación Española de Normalización y
Certificación; 2010.
que entre todos busquemos posibles Hostie R. Técnicas de dinámica de grupo. 7.ª ed. Madrid:
soluciones. Publicaciones ICCE; 1994.
3. Evitar las críticas y los enfrentamientos Miller RF. Organice sus reuniones de manera óptima.
personales entre los asistentes. Barcelona: Plaza & Janés; 1996.
4. Dirigirse con la mirada a todas las Nicolás P, Turbé J. Gestión de reuniones. Barcelona:
Ediciones Gestión; 2000. 1991.
personas del grupo de participantes Núñez T, Loscertales F. El grupo y su eficacia. Técnicas
durante la exposición para favorecer al servicio de la dirección y coordinación de grupos.
la integración. Barcelona: EUB; 1996.
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274 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
Prince George M. Cómo dirigir mejor una reunión. Valls A, Cantavella E. Reuniones eficaces. Barcelona:
Bilbao: Ediciones Deusto; 1979. Bresca; 2009.
Remón Estévez R.M. Organización de reuniones. Dis
ponible en: www.educa.rcanaria.es/Usr/Apdorta/
reu-nion.htm. BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA
Riccardi R. Cómo dirigir una reunión e informar ante un
grupo. Bilbao: Ediciones Deusto; 1984. Demory B. Cómo dirigir y animar reuniones de trabajo.
Simon P, Albert L. Las relaciones personales y las Bilbao: Ediciones Deusto; 1993.
relaciones interpersonales. Manual del animador. Ortiz F. Disponible en: www.paralideres.org/sections/
Barcelona: Herder; 1989. section_114.asp-29k.
Touzard H. La mediación y la solución de los conflictos. www.profesiones.cl/papers/equipo.htm-13k.
Barcelona: Herder; 1981. www.coninpyme.org/pdf/conducindereunionesefectivas.
Vidal, Vidal T. Apuntes personales. 2000 pdf.
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Capítulo 17
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276 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
tuberculosos con los cuales realizaba lectu- Se puede considerar que el psicodrama
ras en las que combinaba la información con es cualquier terapia en la que los pacientes
sugerencias para poder convivir mejor con su representan temas relacionados con sus pro-
enfermedad. Este método, al ver su resultado, blemas en forma de drama improvisado. Si
se extendió a los pacientes diabéticos e in- aparece un material alejado en el tiempo se
cluso a los neuróticos. trae al presente y se reexperimentan los he-
Ya en el terreno específico de la salud chos como si estuviesen ocurriendo de nuevo.
mental, podemos destacar las sesiones gru- Dejaban de hablar de las personas significa-
pales de hipnosis dirigidas por Mesmer y el tivas para hablarles en el momento actual.
movimiento de tratamiento moral, que favo- A la vez, estudia las interrelaciones entre
recían las interacciones y las experiencias los miembros del grupo y su representación
sociales reconstructivas. gráfica (sociograma): es el inicio de la socio-
En el hospital St. Elizabeth de Was- metría científica. Esto tiene sus implicaciones
hington D.C., el psiquiatra Lazell (1921), en el campo laboral, ya que Moreno abordará
siguiendo el método de Pratt, realiza dis- cómo favorecer las condiciones de trabajo
cusiones grupales con orientación psicoana- mediante la mejora del clima laboral y la
lítica, además de lecturas de apoyo. Burrow posibilidad de elegir a sus compañeros.
(1927), uno de los fundadores de la Asocia- Funda la American Society of Group
ción Psicoanalítica Americana, abandona el Psychotherapy and Psychodrama.
diván y crea pequeños grupos informales de Durante la Segunda Guerra Mundial, y
discusión en los que participan pacientes, a partir de esta como contribución de la psi-
familiares y otros colegas con el objetivo de quiatría militar a la guerra civil española, hay
estudiar la conducta social. Este objetivo fue un gran auge de la terapia de grupo; tienen
variando hasta centrarlo en la medición de especial relevancia autores como Mennin-
las menores reacciones cinestésicas de los ger, Wolf, Berger, Shaskan, Schilder, entre
miembros del grupo. los americanos, y Anthony, Foulkes, Bion,
Wender (1936) combina conceptos Bierer, Klein o Rickman, entre los británicos.
freudianos con la psicología de grupo y la El término «dinámica de grupos» fue utili-
interpretación de la transferencia familiar zado por primera vez por K. Lewin en 1944, que
a la transacción dentro del grupo, primero también fue uno de los primeros autores
con pacientes ingresados y posteriormente que crea un centro de investigaciones sobre
ambulatorios. estos temas en la Universidad de Michigan.
Slavson (1943), educador y trabajador A partir de la década de 1970 asistimos
social, a mediados de la década de 1930 pone a un crecimiento sin precedentes, se desa-
en marcha una terapia de actividad grupal rrollan distintas escuelas, surgen técnicas de
con niños inhibidos orientada a expresar sus intervención grupal que pueden utilizarse en
fantasías y sentimientos mediante la acción la educación, la organización industrial, la
y el juego. Desarrolla protocolos de aborda- formación de posgraduados y la asistencia,
je para grupos de discusión psicoanalítica ya sea dentro de instituciones como en el
diseñados para diversas clases de pacientes ámbito comunitario y desde una vertiente
y grupos de edad. Funda la American Group preventiva o paliativa.
Psychotherapy Association. A.A. Schützenberger y M.J. Sauret
Paralelamente, a principios del año (1977) hacen una recopilación de las nuevas
1921, Moreno inicia en Viena «El Teatro terapias de grupos surgidas hasta ese mo-
de la Espontaneidad», germen del psico- mento, analizan a los autores más represen-
drama que desarrollará a partir de 1925 en tativos e incluyen las aportaciones de autores
Estados Unidos, en el instituto Beacon. Basa orientales.
su técnica en dos conceptos clave: la es- En la década de 1990, Kaplan y Sadock
pontaneidad (combinación entre novedad y (1996) recogen, desde una perspectiva an-
adecuación) y la temporalidad (el aquí glosajona y psicodinámica, los principales
y el ahora). autores y técnicas grupales que hoy en día
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 277
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278 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 281
conocidas y aceptadas, al menos en un cierto por lo que algunos autores solo definen como
grado, por la mayor parte de los integrantes grupo a los conjuntos humanos que pueden
del grupo. interaccionar y comunicarse cara a cara gracias
Para que una norma sea definida como a que tienen un número reducido de miembros.
tal, es preciso que sea propuesta o al menos
proclamada en el seno del grupo, y no puede
aducirse su ignorancia. Una vez aceptada, el Cohesión: el espíritu de equipo
grupo ejerce presión para que se cumpla. Las
Se determina por el grado en que los miem-
normas pueden ser:
bros desean participar y permanecer en el
1. Básicas: las que determinan el ser del grupo grupo. Viene dada por las relaciones iniciadas
y lo definen distinguiéndolo de los demás. entre los miembros y sostenidas por las nor-
2. Instrumentales: regulan el funcionamien- mas que, o bien existen ya, o se desarrollan
to del grupo. durante la trayectoria de la consecución de
3. Formales o institucionales: dirigidas ha las distintas metas que se han propuesto.
cia la eficacia y el logro del objetivo. La nota más destacada de la identidad
4. Informales: orientadas hacia la satisfac- de un grupo es la noción de membership (o
ción y los aspectos emocionales, ya sean espíritu de equipo), referida al sentimiento
individuales o colectivos. Emergen con la de coherencia y unidad que experimentan
interacción de los miembros del grupo. y manifiestan los miembros en tanto que se
sienten pertenecientes al grupo.
Se constituye como la demostración,
La «cultura del grupo»: valores en cada uno de los miembros del grupo, de
y creencias la existencia de un YO colectivo en el que
Las normas se relacionan con el conjunto de todos se incluyen sin que por ello pierdan su
valores y creencias que han sido originadas identidad privada, íntima y personal.
dentro del grupo a lo largo de su trayecto- Todo esto se manifiesta en un sentimiento
ria. Este conjunto, si está suficientemente de solidaridad, como la conciencia de perte-
configurado en los grupos que tienen una nencia al grupo, adhiriéndose a su cultura y
identidad propia y una fuerte cohesión, se suscribiendo sus normas mientras se toman
denomina «cultura de grupo». como propios los objetivos y se participa
En los grupos, las escalas de valores activamente en todas las tareas emprendidas.
pueden ser muy distintas e incluso opuestas Según que el espíritu de equipo sea estu-
a las que predominan en el entorno social diado en un momento u otro del grupo, puede
en el que se mueven, pudiendo incluso crear describirse desde un punto de vista genético
situaciones de marginación, anomia u otro o dinámico (Aubry y Saint-Arnaud, 1969):
tipo de desviación social. 1. Elementos genéticos: son los que poten-
cian el nacimiento del grupo y favorecen
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282 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
tareas que sean precisas para lograr miembros del grupo deben llegar a un
los objetivos, o en las actividades acuerdo sobre los espacios y los tiempos en
necesarias para establecer y mejorar los que se puede fumar y los tiempos de
el clima social. ventilación de las salas.
c. Responsabilidad: actitud que lleva a 2. La dimensión del lugar: será en función
todos y cada uno de los miembros de las dimensiones del grupo y las fina-
a comprometerse con el grupo y sus lidades de este.
objetivos. Cada uno es parte funda- 3. La disposición de las sillas: esquema
mental en las acciones y las decisio- circular, donde cada uno puede ser visto
nes de todo el grupo. Tendrá distinta y nadie está en posición dominante. De-
gradación en función del grado de bemos recordar que el ser humano tiene
ejercicio del liderazgo. sus órganos de percepción dispuestos
para percibir en círculo.
4. Se debe restringir el acceso al recinto en
Atmósfera grupal el momento de la sesión de trabajo grupal
Es la disposición de ánimo, tono o sentimien- con el fin de evitar las interrupciones y
to que está difundido entre los miembros del garantizar la confidencialidad. El mo-
grupo. Este temple emocional del conjunto mento de la sesión grupal es «sagrado»,
hace que la atmósfera de grupo sea: por lo único e irrepetible que tiene lo que
en ella está sucediendo.
1. Amistosa-hostil.
2. Fría-cálida. Sentimiento de igualdad y reducción
3. Rígida-cordial. de la intimidación
4. Armoniosa-disonante.
5. Irritada-relajada. Hay muchas maneras de contribuir a dar
6. Agresiva-serena. sensación de igualdad:
1. Disposición de la sala y las sillas, en un
Para la creación de esta atmósfera es muy
mismo plano y en círculo.
importante el papel que desempeñan los pro-
2. Uso del nombre de pila, en lugar de ape-
fesionales de enfermería, ya que nadie duda
llidos o títulos y jerarquías.
que son ellos los que interactúan durante más
3. Clima permisivo e informal, sin llegar a
períodos con el grupo, por lo que su actitud,
la trivialidad.
aptitud, características de personalidad y for-
4. Indumentaria informal, puede ser útil in-
mación en técnicas de comunicación serán
vitar a los participantes a que se pongan
relevantes para en cada momento poder diag-
cómodos. Cada tipo de técnica puede
nosticar el clima grupal y aplicar la medida
requerir una forma: no es lo mismo un
correctora oportuna.
grupo de salud que una sesión de musi-
A modo orientativo se deberán de tener
coterapia o de relajación.
en cuenta los siguientes factores:
5. El tamaño del grupo puede variar entre
1. Ambiente físico. 4 y 20 miembros. Para muchos autores,
2. Sentimiento de igualdad y reducción de 8-10 es el número ideal.
la intimidación.
3. Forma de iniciar la reunión. Forma de iniciar la reunión
Es un momento decisivo para la atmósfera
Ambiente físico grupal. El coordinador tendrá en cuenta:
1. El tiempo que habla.
Es un factor fundamental para determinar la
2. El modo en que se dirige al auditorio.
atmósfera del grupo. Al analizarlo tendremos
3. La importancia de realizar ejercicios de
en cuenta:
caldeamiento grupal adecuados a cada
1. La iluminación y la ventilación del lugar grupo y a cada técnica (posteriormente
donde convive y se reúne el grupo. Los se abordará este apartado).
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 283
a la comunicación.
tener en cuenta el lenguaje del cuerpo que
completa el sentido de lo dicho verbalmente
y es de gran ayuda en las relaciones inter-
personales.
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284 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 285
(ideólogo).
siguientes características definitorias (Los-
certales, 1996): Además, el coordinador, como persona di-
ferenciada dentro del grupo, ha de poseer
1. Ofrecer un sistema de valores propio.
una serie de características personales que,
2. Demostrar al grupo y a sus miembros
junto a su dominio de técnicas, facilitarán
aceptación, afecto y confianza.
el trabajo grupal. Distintos autores señalan
3. Sabe elegir y dirigir a sus colaboradores,
las siguientes:
delegando adecuadamente atribuciones y
funciones. 1. Estar dispuesto a relacionarse, saber es-
4. Tiene capacidad para tomar decisiones cuchar y estar interesado realmente en la
y establecer los objetivos de manera gente.
conjunta con el grupo, motivándolo ade- 2. Saber comunicarse de forma clara.
cuadamente. 3. Tener seguridad en sí mismo.
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286 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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292 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 293
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294 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
gráfico diverso, muñecos anatómicos, aparato El 15% del VCT en forma de proteínas.
de televisión, aparato reproductor de vídeos. 0,8-1,2 g en forma de calcio.
VCT: valor calórico total diario que
Taller sobre alimentación
debe aportar una dieta equilibrada.
Definición
Grupo de actividades dirigidas a estimular
el conocimiento sobre la alimentación. La Realización del plato y modo
alimentación es algo más que comer; es una de hacerlo
fuente de placer, de relacionarse con el en- 1. Los participantes toman nota de la receta
torno, es un comportamiento con el que se proporcionada por cualquier miembro del
puede mejorar nuestro bienestar. grupo. Se da antes de iniciar la realización
del plato. Comprueban si se dispone de to-
Objetivos
dos los ingredientes, con las medidas apro-
1. Adquirir conocimientos sobre la alimen- piadas así como los utensilios necesarios.
tación. 2. Cada grupo de participantes se encarga de
2. Desarrollar habilidades para realizar una un aspecto de la preparación: limpieza
alimentación adecuada. de los ingredientes, medición, adobo, etc.
Procedimiento 3. Se realiza el plato y cada uno añade a su
receta las notas que considera oportunas
Se divide en tres partes:
como, por ejemplo, pequeños trucos.
1. Información sobre combinación de una 4. Finaliza la preparación con una adecuada
dieta, calorías, tipos de dietas: astringen- presentación del plato realizado.
tes, de residuos, etc.
2. Realización del plato en la cocina. Receta Información acerca de los ingredientes
con ingredientes y modo de hacerlo. 1. Además de la información sobre el modo
3. Información a propósito de los ingre- de preparar una determinada comida, se
dientes: forma de despiece, nombres más aporta información acerca de los ingre-
comunes, lugar para adquirirlo, etc. dientes, en los siguientes términos:
a. Carnes: despiece de ternera, vaca,
Información dietética
cerdo y cordero.
Otro tipo de información que se discute gru- b. Aves: despiece de aves.
palmente es: c. Se señalan las partes más adecuadas
1. Información calórica-energética de los para cada preparación, la forma de so-
alimentos: cada participante configura licitarla y los nombres más comunes.
un menú teniendo en cuenta las calorías d. Pescados: pescados planos, redondos,
que desea/debe o puede consumir: 1.500, azules y blancos.
2.000, 3.000 calorías. e. Moluscos.
2. Información sobre cómo conseguir una f. Crustáceos.
dieta astringente, o rica en residuos (se- 2. El grupo comenta las distintas formas de
gún proceda); alimentos apropiados e denominación, según el área y la limpieza
inapropiados. previa al consumo.
3. Información sobre la posible interacción a. Salsas: vinagreta, mahonesa y be-
medicamentosa de algunos alimentos. chamel.
4. La tabla 17-1, a modo orientativo, se puede b. Tiempos de cocción de los principa-
dar a los participantes para su utilización. les alimentos.
c. Pesos y medidas con equivalencias.
Se aconseja tomar diariamente: d. Formas de congelar y de descongelar.
e. Uso de la temperatura del horno.
El 50-55% del VCT en forma de hidratos f. Adobos, especies y condimentos.
de carbono. g. Quesos: tipos, procedencia y utiliza-
El 30-35% del VCT en forma de lípidos. ción.
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 295
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296 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 297
2. Se analiza dónde aparecen la fecha, los Variante. Una vez obtenido el esquema de la
titulares, el editorial, etc. noticia, que intente redactarla de otra forma
3. Se discute grupalmente y se analizan las o que sea capaz de memorizarla y repetirla a
distintas preferencias. los demás, sin ningún dato delante.
4. Se discute la estructura de distintos pe-
riódicos. Palabras clave
Procedimiento:
Distribución de las noticias 1. El terapeuta entresaca de todas las noti-
Procedimiento: cias alguna o algunas que sean comunes
1. Se pide a los pacientes que analicen la a todas ellas.
portada de un periódico, ¿cómo se re- 2. Pregunta a los miembros del grupo dis-
saltan las noticias?, ¿dónde están las de tintos significados de esa palabra.
mayor importancia? 3. El terapeuta lee distintas noticias resumi-
2. Se anotan las aportaciones de cada uno. das y los pacientes tienen que identificar
3. Se dividen en pequeños grupos y se las noticias en las que aparece la palabra o
pide que construyan una portada de palabras clave comentadas anteriormente.
un periódico, por ejemplo, con las noti
cias importantes de la «unidad», o si se Identificación
hace de forma individual, con aspectos Procedimiento:
importantes de cada uno, ocurridos re- 1. Cada paciente escoge una noticia, mejor
cientemente (últimas Navidades, o vaca de tipo local o regional.
ciones…). 2. Identifica al protagonista de la noticia:
4. En un mural grande se exponen las dis- nombre, edad, domicilio, ciudad o ba-
tintas «portadas» creadas. rrio donde vive, profesión, etc.; esto lo
escribe en un folio, en la otra cara de ese
¿Qué pasa en mi entorno? folio escribe sus datos personales (los del
paciente) y alguna característica personal
Procedimiento: (color del pelo, ojos, etc.).
1. Se divide en grupos a los pacientes y se 3. Se comparan: similitudes y diferencias.
entrega a cada grupo una sección: local,
regional, nacional e internacional. Secciones útiles
2. Cada grupo selecciona dos o tres noticias
que sean relevantes y que interesen a la Procedimiento:
mayor parte del grupo. 1. En cada sesión de trabajo se puede es-
3. De cada noticia se selecciona: ¿qué su- coger una sección distinta: ofertas de
cedió?, ¿quién(es) fueron los protagonis- trabajo, ocio, cartelera, alquiler y venta
tas?, ¿dónde y cuándo sucedió?, ¿número de vivienda.
de implicados?, ¿lugar? 2. Se pide a los pacientes que seleccionen
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298 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 299
del personaje; comentarios con los que extensión. En estos límites está la
el narrador detiene la acción por filo- fuerza del cuento.
sofar demasiado sobre ella; inacción c. El personaje en la novela puede ser el
del personaje por abulia, inocencia o elemento fundamental y su presenta-
impotencia. ción puede ser tanto o más importante
3. Desenlace: que la acción, según de lo que trate la
a. Terminantes: el problema planteado novela. En el cuento está supeditado
queda resuelto, sin dudas, sin cabos a la trama y al acontecer.
sueltos.
b. Problemáticos: el problema sigue sin Escoger una letra
resolverse. Procedimiento. Tomar un texto y entresacar
c. Dilemáticos: el problema ofrece dos palabras que no contengan una determinada le-
soluciones: el lector es libre para tra, por ejemplo, la «a» o la «i». Escribir un texto
elegir la que se le antoje pero no que no contenga palabras con esa misma letra.
puede estar seguro de que esa sea la
verdadera. Usando la ironía
d. Promisorios: se sugieren, sin especi-
Procedimiento. Hablar de un objeto sin
ficarlas, posibles aperturas: «Quizá,
nombrarlo, empleando un tono irónico.
en el futuro…».
e. Invertidos: el protagonista, al final, Presente, pasado y futuro
toma una actitud opuesta a la inicial.
Procedimiento. Tomar como referencia una
f. Sorpresivos: con un truco, el narra-
fotografía o un cuadro y pedir una historia
dor engaña al lector y en las últimas
donde se hable del pasado, el presente y el
líneas lo desengaña con una salida
futuro de esos personajes.
inesperada.
Puede ser útil el siguiente esquema: Ganando vocabulario
Procedimiento:
• Inicio: ¿quién es?, ¿cómo es?, ¿dónde? 1. Todo el grupo hace una lista de verbos
• Desarrollo: ¿qué hace?, ¿qué?, ¿cuándo? (con un sentido determinado, por ejem-
• Desenlace: ¿qué le hace?, ¿a quién? plo, que expresen emociones fuertes),
Se pueden realizar diversas combinaciones: adjetivos, adverbios, etc.
2. Hacer frases combinando esas palabras.
• Inicio: ¿dónde?, ¿cuándo? 3. Hacer historias con esas frases.
• Desarrollo: ¿quién?, ¿qué hace?, ¿a
quién?, ¿cómo es? Deshacer un texto
• Desenlace: ¿qué le hace?, ¿qué? Procedimiento:
Diferencias entre cuento y novela 1. Elegimos un texto cualquiera y lo des-
componemos en palabras sueltas. Pedi-
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300 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 301
b. Un sentimiento de incompetencia
(justificado o no) para encontrar me-
«La adaptación consiste en elegir un com- dios de satisfacción a esta necesidad.
portamiento que corresponda a las normas
c. Condiciones ambientales deficientes
del medio; comportamiento que será con-
siderado como adecuado en el marco de u obstaculizantes de la satisfacción
una subcultura. La actualización consiste de la necesidad frustrada.
en elegir el comportamiento que se ajuste 13. En la búsqueda de la satisfacción de las
mejor a las exigencias de cada persona, el necesidades, la persona vive tensiones
que resulte de una elección personal» (St. que se expresan en forma de frustracio-
Arnaud). nes, conflictos o amenazas más o menos
importantes que tienen repercusión so-
5. Para tomar conciencia de sí misma la bre toda la persona, y que son vividos
persona posee un sistema que le informa de forma diferente según:
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302 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 303
Objetivos
Interpretación de los resultados. En cada
1. Conocimiento del grado de satisfacción ejemplo de necesidad, el «nivel de respuesta
de necesidades de cada individuo. real» puede situarse entre 0 y 5.
2. Conocimiento de los obstáculos o im- En una situación óptima de libre elec-
pedimentos que interfieren en la satis- ción, debería haber un equilibrio entre el
facción de la necesidad. valor que la persona concede a una necesidad
3. Análisis de la importancia que se le con- y la energía y el tiempo que esta dedica a
cede a cada necesidad. satisfacerla.
4. Análisis del grado de implicación que
cada individuo está dispuesto a desa- 1. Cuanto mayor es la diferencia entre un
rrollar en el futuro para satisfacer sus resultado inferior a uno (1) respecto a la
necesidades. satisfacción real (grado de satisfacción)
frente a la satisfacción deseada (grado de
importancia), mayor es la posibilidad
Procedimiento de vivir la frustración. Esta última puede
1. Se da la siguiente consigna: traducirse en sentimientos tales como la
a. Cada participante responderá al agresividad, la soledad, la tristeza, la de-
cuestionario que se adjunta en la presión, la vergüenza, la ansiedad, etc.
figura 17-4. En un caso extremo, habrá presencia de
b. Una vez que se ha respondido, se dan enfermedad. En cada ejemplo de nece-
las instrucciones para su corrección, sidad donde la distancia sea negativa
según se detalla. puedes intentar responder a las siguientes
preguntas:
Modo de utilización de la guía m. ¿De qué forma me impido yo satis-
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304 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 305
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306 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 307
Procedimiento
Acercándome a las emociones propias
y ajenas 1. Identificación de las emociones básicas,
comunes a todas las personas, indepen-
Introducción dientemente de su edad, sexo, lugar de
Las emociones son procesos químicos y procedencia: ira, miedo, alegría, tristeza
energéticos que ofrecen información sobre y asco.
nuestros deseos, necesidades y su grado de a. Grupalmente, cada participante es-
satisfacción, acerca de nuestras preferencias coge una de las cinco emociones
e inclinaciones, así como relativas a antece- básicas reconocida en un hecho: ya
dentes de nuestra historia personal y familiar. sea un anuncio, una noticia de un
Si sabemos relacionarnos con ellas, todas periódico, o una foto de una revista
las emociones pueden ayudarnos a crear y la presenta al grupo señalando sus
una vida gozosa; si las apartamos de nuestra características.
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308 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 309
entre sus miembros, como son la igual- • Poder: compartidos por la pareja, los
dad entre el hombre y la mujer en la pareja, niños son consultados, posibilidad de
la incorporación masiva de la mujer al mundo negociación, estructura flexible, claridad
laboral, la extensión de la tolerancia ante los en la jerarquía.
comportamientos hasta ahora no admitidos • Comunicación: clara, directa, espon-
o censurados, etc. tánea, asertiva, con humor, receptiva a
En España, el cambio experimentado nuevas ideas.
por la familia durante las últimas décadas,
ha sido vertiginoso, podríamos decir que a La reacción de la familia ante la enfermedad
partir de 1975 la legislación familiar deja de uno de sus miembros puede ser, principal-
de estar bajo el control de la Iglesia. Con mente, de dos tipos:
la transición a la democracia se ha pasado • La tendencia centrípeta: se expresa
del modelo tradicional de familia único por una gran cohesión alrededor de la
con respaldo legal e impuesto, incluso, con persona afectada, el cual es el centro
la amenaza de sanciones penales si algún de interacciones y atenciones, las com-
miembro, sobre todo la mujer, no lo acata- plicaciones o recaídas son acompañadas
ba, a un pluralismo de distintas formas de de sobresaltos.
convivencia familiar. Desde julio de 2005 • La tendencia centrífuga: esta se iden-
es posible legalmente el matrimonio entre tifica con la presencia de conductas
personas del mismo sexo. evitativas con respecto a la enfermedad.
Los problemas de salud, sobre todo de
Una orientación familiar en salud implica
salud mental, desde el modelo tradicional se
no desligar el problema de salud del con-
han enfocado siempre desde el punto de vista
texto familiar. No siempre es necesaria la
del individuo que sufre o tiene el problema
convocatoria de la familia. La participación
centrándose en él, por lo que se orientan a lo
voluntaria y planificada de la familia en los
intrapsíquico. En cambio, nuevos modelos
cuidados puede significar, para el equipo de
de atención sanitaria conciben los problemas
salud, tener un aliado potencial en el trata-
en el contexto específico en el que se sus-
miento; además de contemplar las posibles
citan, ya sean en el sistema familiar, escolar o
dificultades que la persona puede tener para
social. Se basan en el modelo biopsicosocial
superar los obstáculos del propio ciclo vital
de salud y no en el modelo biomédico: ver
por el que está pasando.
la enfermedad dentro de un marco más am-
Cuando la familia es capaz de cuestio-
plio de múltiples sistemas que interactúan
narse y pone en duda ciertos aspectos pro-
(biológico, individual, familiar, comunitario).
pios o actitudes equivocadas, la evolución
Considerar al individuo con problemas en
del proceso tendrá mejores resultados y será
su contexto familiar es plantear que el núcleo
más rápida.
familiar es fuente principal de creencias y
Si todo cambio se le exige a la persona
pautas de comportamientos relacionados con
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310 SECCIÓN | IV Comunicación grupal
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Capítulo | 17 Sensibilización de técnicas grupales 311
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Santos; 1990.
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Autoevaluación
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A continuación proponemos 52 preguntas respuestas están justificadas al final de este
con cuatro respuestas posibles. De entre ellas, bloque de preguntas.
solo una es cierta, o es la más completa. Las
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314 Autoevaluación
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Autoevaluación 315
20. La aceptación incondicional es: 26. Los «Mensajes Yo» son los que se
a. Una de las actitudes básicas para deben dar cuando:
que haya una buena relación. a. El paciente tiene un comportamien
b. Una actitud que se debe evitar en la to que a mí me resulta inadecuado.
relación, pues solamente nos pode b. Cuando el paciente tiene compor
mos relacionar bien con los que nos tamientos que perturban mis inte
son simpáticos. reses.
c. Poner condiciones a aceptar a algu c. Cuando el paciente se comporta de
nos pacientes. una manera que tiene consecuencias
d. No debemos aceptar de forma in negativas para mí.
condicional a los pacientes. d. Todas son verdaderas.
21. En la aceptación incondicional hacia 27. La fórmula que se debe tener en cuen
el paciente debemos: ta para dar un buen «Mensaje Yo» es:
a. En todo momento saber interpretar a. «Cuando…» y describe el compor
si es digno de ser aceptado o no. tamiento inadecuado sin juzgarle.
b. Aceptar que el paciente pueda estar b. «Me siento…» y describe el senti
agresivo, ansioso, preocupado, etc. miento que tiene.
c. Aceptar a la persona como es, no c. «Porque…» y describe las conse
como me gustaría que fuera. cuencias que tiene para su vida el
d. b y c son verdaderas. comportamiento del otro.
22. La autenticidad es: d. Tiene en cuenta todas las anteriores
a. Una de las actitudes básicas de una y, además, le pide ayuda sin impo
buena relación, según Watzlawick. nerle el cambio.
b. Ser congruente entre lo que pienso, 28. Cuando ambos tenemos un problema,
siento, digo y hago. la forma más adecuada de comunica
c. Ser brutalmente sincero. ción es:
d. No cortarme en decir y responder lo a. El profesional debe imponer su
que me parece al paciente. criterio, pues es el que sabe.
23. Un buen profesional es el que: b. Para que no se enfade el paciente,
a. Sabe dirigir y mandar, y no permite tratar de no contradecirle.
que los pacientes sean los que opinen. c. Practicar el consenso utilizando la
b. Sabe aconsejar al paciente sobre lo empatía y la escucha activa.
que tiene o no que hacer. d. Todas son verdaderas.
c. Es el que continuamente le dice al 29. Entre las consecuencias positivas que
paciente lo que tiene o no que hacer. tiene el método «yo gano y tú pierdes»
d. Todas son falsas. tenemos:
24. Entre los obstáculos que debe evitar a. Que se termina pronto la discusión,
un profesional tenemos: pues yo sé qué es lo que más le con
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316 Autoevaluación
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Autoevaluación 317
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318 Autoevaluación
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Autoevaluación 319
tarle cómo se siente ante lo que nos está comunicamos, también sería un buen
diciendo. feedback, no solo a lo que yo capto, sino
9. d) Como vemos, todas pueden ser ver también a lo que interpreto.
daderas, pero como no lo sabemos, es 17. b) La empatía es un pilar fundamental
conveniente clarificar con el paciente de la comunicación, ya que al «poner
nuestras intuiciones o interpretaciones, nos en el lugar del otro», la persona se
así no nos equivocaremos. siente comprendida y se abre más a la
10. c) Ya hemos dicho que toda comunica comunicación y a la relación.
ción que se preste a interpretación es 18. c) Definimos la empatía, de una forma
mala comunicación y, por tanto, para no muy global, diciendo que es «la capacidad
interpretar, lo mejor es clarificar con el de ponerme en el lugar del otro para ver
paciente lo que observamos o la inter las cosas, sentirlas, etc., como él», pero
pretación que hacemos. sin quedarnos ahí «enganchados», pues
11. d) Todas son falsas, pues si bien la pri en ese caso simpatizamos y terminamos
mera es en parte verdad, no solo basta por sufrir y arrastrar los problemas con
con expresar los contenidos, hay que el paciente.
expresar lo que se siente ante lo que se 19. d) La empatía es una actitud muy com
dice y lo que se espera del receptor al pleja, pues supone que renunciamos a
comunicarnos con él. nuestros filtros con los que captamos
12. c) Todas son verdaderas, si bien la más la realidad para verla, sentirla, vivirla,
completa es la c. Un buen emisor, con etc., como el paciente o interlocutor.
el fin de que el receptor no tenga que Asimismo, es una actitud que se vive en
interpretar o jugar a adivinar, tendrá la el aquí y el ahora de la situación que se
mejor comunicación cuando exprese: está viviendo, para no llevar consigo a
contenido, sentimiento, demanda y nuestra vida diaria los problemas o las
tenga en cuenta la forma de decirlo, es preocupaciones que vive el paciente.
decir, con delicadeza. 20. a) La aceptación incondicional es otro
13. d) Todas son verdaderas, ya que es fre de los pilares que pone C. Rogers como
cuente que al comunicarnos digamos: básicos de la relación, ya que esta per
«Todos los hombres son iguales». O bien mite que aceptemos al paciente tal cual
que al describir algo, debido a la subjeti es, con su simpatía o antipatía, incluso
vidad de cada uno, sin querer omitamos con su agresividad, pues hay momentos
cosas, o bien que, dado que nuestra per en los que la persona vive situaciones de
cepción es muy subjetiva, que lleguemos ansiedad que le producen agresividad y
a ver lo que no hay o a exagerar, etc., que, si nos ponemos en su lugar, com
con lo que estamos distorsionando la rea prendemos y, por tanto, aceptamos que
lidad. lleva razón en sentirse como se siente.
14. c) Feedback y empatía deben ser dos pi 21. d) Supone que acepto a la persona como
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lares que no se deben olvidar y practicar es, no como me gustaría que fuera. Por
continuamente si queremos que nuestro tanto, acepto sus estados de ánimo, su
interlocutor se sienta comprendido y antipatía, si es alto o bajo, grueso o
escuchado. delgado, guapo(a) o feo(a), etc.
15. a) Otro de los pilares de una buena co 22. b) La autenticidad es otra de las actitu
municación, además de la empatía, es la des básicas que pone C. Rogers como
autenticidad, o coherencia entre lo que fundamentales para la relación de ayu
pienso, siento, digo y hago, tarea nada da. Consiste en ser coherente entre lo
fácil. que pienso, siento, digo y hago.
16. b) El feedback consiste en reflejar al 23. d) Todas son falsas, pues si recordamos
paciente lo que hemos captado de su lo que nos dice Th. Gordon sobre los
mensaje; por tanto, si hacemos una obstáculos o barreras a la comunicación,
interpretación de su mensaje y se lo cualquiera de estas actitudes supone un
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320 Autoevaluación
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Autoevaluación 321
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322 Autoevaluación
tanto turbados, conviene buscar algún ningún momento nadie de los presentes
profesional con quien hagamos una piense que hay alguna manipulación.
supervisión de nuestra situación. 51. d) Ya hemos recalcado en diversos pun
48. d) Creo que con lo dicho en el punto 47 tos que todo lo que sea interpretación
es suficiente para comprender esto. sin clarificación crea malestar e incom
49. a) Las reuniones tienen un coste alto en prensión en las personas, pues pueden
tiempo y dinero; de aquí que se plani sentirse tratadas o interpretadas en lo
fiquen bien y se evalúen los pros y los que no han dicho o son, y esto da lugar
contras de hacerlas, a fin de que su rea a malestar en la relación grupal.
lización compense el tiempo y el gasto 52. b) Ya hemos señalado que una reunión
económico; asimismo, se debe tener en es eficaz si está bien planificada, con
cuenta el sentimiento y el respeto de las el tiempo bien estructurado y unas re
personas que asisten. glas claras en la forma de proceder o de
50. d) Una reunión se debe planificar bien, participar en ella; asimismo, si hay que
tanto poniendo unas normas que todos llamar al orden a alguno, debe hacerse
debemos respetar para su buen funcio con un «Mensaje Yo» y mostrar mucho
namiento como elaborando una buena feedback y empatía para que lo que está
estructura del tiempo, los temas, etc., claro para mí también lo esté para el
y todo con transparencia para que en otro, y viceversa.
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Conclusiones
Hablar libremente con otra persona de lo midad, cuán productivo es, cómo entiende las
que pensamos y sentimos es una acción li cosas, cómo se relaciona con su propia divini
beradora. Nos crea y recrea como personas. dad, depende principalmente de la habilidad
Es ya de dominio común el oír y sobre todo que tenga para comunicarse (Satir, 1987).
experimentar que lo que nos hace sentirnos La comunicación abarca toda la amplia
personas es la relación. «Lo que cura es la gama de formas en que las personas inter
relación», diría I. de Yalom. De aquí que le cambian información; incluye la información
prestemos una importancia fundamental. que proporcionan y reciben, y la manera en que
El tiempo consagrado a esta tarea nunca esta se utiliza. La comunicación compren
será suficiente, ya que la comunicación es de el sentido que las personas confieren a la
vital para nuestro crecimiento y desarrollo información.
personal y el de nuestro interlocutor. La co La comunicación es un proceso de apren
municación hace que nos sintamos mejor y dizaje. Cuando llegamos a la edad de cinco
con más recursos para vivir las situaciones años, ya hemos tenido millones de experien
que tengamos que vivir. cias en compartir información. A esa edad
Las principales condiciones para que una ya hemos desarrollado ideas respecto a la
relación sea mutuamente rica y liberadora autoimagen, lo que podemos esperar de los
serían, entre otras, las siguientes: demás, y lo que parece posible o imposible
para nosotros en el mundo.
• Debemos ser conscientes de nuestros Una vez que la persona se da cuenta de
propios pensamientos y sentimientos
aceptándolos como nuestros (a fin de que ha aprendido toda su comunicación,
que no haya fenómenos proyectivos) y puede proceder a cambiarla si así lo cree
expresarlos de la forma más adecuada necesario.
posible (como hemos señalado). La comunicación es como una cámara ci
nematográfica sonora. Funciona únicamente
• Cada uno debemos escuchar y saber en el presente, aquí mismo, en este momento,
aceptar los pensamientos y sentimientos
del otro (son suyos, le pertenecen) y res entre tú y yo. Funciona de la siguiente forma.
ponder a estos con respeto. Tú estás frente a frente conmigo; tus sentidos
captan mi apariencia, mi voz, mi olor y si por
Por tanto, podemos decir que la comunica casualidad me tocas, cómo me sientes.
ción es el proceso interpersonal en el que los Tu mente te informa entonces de lo que
participantes expresan algo de sí mismos, a yo significo para ti, aprovechando tu expe
través de signos verbales o no verbales, con riencia pasada, especialmente la que hayas
la intención de influir de algún modo en la tenido con tus padres, con otras figuras de au
conducta del otro. toridad, el aprendizaje hecho a través de los
Una vez que el ser humano llega a es libros, o de las experiencias de tus sentidos.
te mundo, la comunicación —verbal o no De acuerdo con lo que te informa tu cerebro,
verbal— resulta ser el factor más importante te sentirás cómodo o molesto, tu cuerpo es
que determina el tipo de relaciones que vaya tará relajado o en tensión.
a tener con los demás y lo que le suceda en Mientras tanto, yo también paso por
el mundo que le rodea. Cómo cada uno se las una experiencia similar. También veo, oigo,
arregla para sobrevivir, cómo llega a la inti siento, pienso, tengo un pasado, valores y
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324 Conclusiones
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Conclusiones 325
Con lo que hemos dicho, creemos haber A todo esto hay que añadir que nos co
comenzado a diseñar que la comunicación es municamos con toda nuestra persona. Resulta
muy compleja y que se necesita un aprendiza que me comunico desde mi autoestima, o ba
je de esta. La comunicación humana consiste ja estima; desde mis valores éticos o morales,
siempre en formar imágenes mutuas, pero las desde mis ideales, o ansiedades y angus-
personas involucradas pueden o no compartir tias; desde mis roles o los roles que desempeño
esas imágenes. Por otra parte, el significado o que me hacen desempeñar en la sociedad;
que cada uno le da a las palabras, así como desde mis necesidades físicas, psíquicas, so
los sentimientos que cada uno tiene, son tan ciales o espirituales, y lo mismo que yo me
personales que si todo esto no se clarifica se comunico desde todo esto, también la perso
corre el peligro de no comprenderse, pues na se comunica conmigo teniendo detrás de
en el fondo no hablan el mismo lenguaje. sí todo esto. La conclusión es clara: si no nos
Cuando todo esto que estamos diciendo no se clarificamos aun hablando de lo mismo, no
clarifica, se corre el riesgo de adivinar o inter hablamos —ni mucho menos sentimos— lo
pretar los significados y los sentimientos, y lo mismo, y sabiendo que lo que está claro para
malo es que estas interpretaciones subjetivas mí solo lo está para mí; si no tenemos esto en
o adivinanzas se toman por hechos. cuenta no es posible comprenderse.
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