Actualidad familiar a la luz de la comunicación y la teoría general de los sistemas

Estefany Hernández Restrepo

Facultad de psicología, Universidad Antonio Nariño

Seminario optativo I

Marcela Rodriguez

03 marzo 2022
 Actualidad familiar a la luz de la comunicación y la teoría general de los sistemas

Para empezar, es necesario hacer una breve introducción con aspectos importantes de la

teoría general de los sistemas, el concepto de familia y la comunicación. En primer lugar, el

concepto de familia ha estado inmerso en modificaciones y diferentes interpretaciones con lo largo

de los años, anteriormente se concebía solo un modelo de familia que es conocida como la familia

nuclear, pero ahora, la realidad que se presenta es más diversa, las transformaciones incluyentes en

la sociedad y en el pensamiento ha permitido concebir a la familia de diferentes formas y así mismo

ha accedido a que su conformación no dependa exclusivamente de lazos consanguíneos. Por su

parte, la comunicación es un aspecto característico de los seres humanos, que ha permitido nuestra

evolución, este es un tema del que se podría hablar extensamente, que cuenta con estudios y

enfoques desde diferentes ámbitos, pero que para este caso se va a definir como un sistema de

interacción digital o análoga que siempre emite información, es decir que no solo se establece

comunicación de manera verbal, sino que la conducta también expresa, hacer o no hacer sea de

manera consciente o inconsciente siempre lleva implícito un mensaje. Por último, un sistema según

la RAE es un conjunto estructurado de unidades relacionadas entre sí; así pues, en pocas palabras la

teoría general de los sistemas (TGS), ha estudiado los elementos de un sistema, la relación que tiene

entre si y como desde su interacción conforman una totalidad que está en constante movimiento

para alcanzar su funcionamiento.

La familia es un sistema, uno dinámico y variable, que ha evolucionado con el tiempo y ha

llegado a lo que hoy es. Desde un panorama general, se pueden resaltar aspectos como que ha

pasado de considerarse estar siempre compuesta por un conjunto de personas a afirmar que una

familia puede ser unipersonal, también que hace unos años predominaba en su mayoría como un

modelo conservador, tradicional, patriarcal, con división muy marcada de roles, ahora se puede

reflejar un poco más flexible e igualitaria, donde a pesar de haber una jerarquización es más

democrática en la toma de decisiones y más abierta a la escucha de opiniones, pero esto igualmente
ha traído dificultades en el establecimiento de reglas y ha generado tipos de crianzas más

permisivos. Claro está, estos modelos no son exclusivos, no quiere decir que siempre se va a lograr

definir en que tipo de familia nos encontramos, si en una con un modelo antiguo o una con un

modelo moderno, en una monoparental, biparental u homoparental; por otra parte, tampoco es un

sistema estático ya que esta pasa por diferentes fases o ciclos que generan alteraciones, a su vez no

está conformada por individuos de una misma generación, los cuales tampoco han tenido las

mismas experiencias de vida ni han contado con las mismas herramientas para afrontar las

situaciones, pero aun así sin importar estas características que la definan va a tener su

funcionalidad.

Dicho de otra manera, la familia cumple con los conceptos básicos de la teoría general de

los sistemas, busca alcanzar el mismo objetivo así se parta de condiciones diferentes, tienen

aspectos que mantiene el equilibrio, promueve la evolución y el cambio que, aunque este cambio

sea individual este va a afectar el todo. Sin embargo, a pesar de todas las diferencias en tiempos,

generaciones, modelos, características y más, hay un factor determinante para la adaptabilidad al

sistema del que somos pertenecientes, ese factor es la comunicación.

La comunicación es lo genuinamente más humano y característico de nuestra sociedad, es

determinante para el funcionamiento familiar y ella ha influido en todos los aspectos de su

evolución; viendo la comunicación desde un enfoque sistémico hallamos un constructo de

desarrollo que fomenta el bienestar y la calidad de interacción entre las personas, en este caso los

miembros de la familia, al igual que el concepto de familia, la comunicación también ha

evolucionado, comparada con lo que era años atrás, en la actualidad influye con más fuerza en el

comportamiento individual lo que a su vez ha contribuido en las renovaciones de las estructuras

familiares.

En conclusión, cada miembro de la familia es significativo para el equilibrio de la misma,

pertenecer a una agrupación de este tipo es de vital importancia y desarrollo psicológico y social, la
interacción familiar, sea sana o no al igual que los sistemas tienen la capacidad de organizarse para

cumplir su función, la familia y la comunicación poseen una interrelación, una nutre a la otra y

supone un vínculo que define las relaciones, ninguna familia es igual que otra, los cambios sociales

tienen influencia en el comportamiento individual y familiar y por ello el concepto de familia que

hoy conocemos será transitorio y en un futuro será recordado como un modelo antiguo base de

estudio para entender las nuevas dinámicas familiares.