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El profesional de enfermería al adquirir el compromiso de formar parte del cuerpo

de salud este se adhiere a normas legales y éticas para regular su


comportamiento; así mismo sus acciones, decisiones y opiniones tratarán de
orientarse en el marco del deber ser para una vida civilizada, respetando lo que se
considera deseable y conveniente para bien de la sociedad, de la profesión, de los
usuarios de los servicios de enfermería y de los mismos profesionistas.

En el trabajo de enfermería es fundamental contar con un código ético para


resaltar los valores heredados de la tradición humanista, un código que inspire
respeto a la vida, a la salud, a la muerte, a la dignidad, ideas, valores y creencias
de la persona y su ambiente. Para ello surgió el decálogo del código de ética para
enfermeras y enfermeros en México, donde hoy analizaremos el punto número 8
de este el cual nos dice: “Asumir el compromiso responsable de actualizar y
aplicar los conocimientos científicos, técnicos y humanísticos de acuerdo a su
competencia profesional.” Este punto del decálogo se basa en la corriente
positivista la cual es una corriente que afirma que el único conocimiento auténtico
es el conocimiento científico, y que tal conocimiento solamente puede surgir de la
afirmación de las teorías a través del método científico. Esta corriente se relaciona
porque este punto nos dice que el personal de salud debe estar en un estado
constante de aprendizaje para así poder proporcionar un adecuado y eficaz
cuidado de los pacientes, y que los conocimientos que deben ser constantemente
renovados son los científicos y técnicos que a su vez derivan de la prueba y error
a través de un método científico que ayudo a el desarrollo de estos mismos. Así
mismo podemos mencionar a John Stuart Mill que mencionaba que el
conocimiento se deriva de la experiencia por lo que necesariamente es limitado,
así mismo nos mencionaba que todos tienen la libertad de expresar y discutir
ideas es una condición necesaria para el progreso social.

Este punto a su vez está ligado a principios o valores como lo son la beneficencia
y no maleficencia que se entiende como la obligación de hacer el bien y evitar el
mal; También la justicia que no se refiere solamente a la dispon ibilidad y utilización
de recursos físicos y biológicos, sino a la satisfacción de las necesidades básicas
de la persona en su orden biológico, espiritual, afectivo, social y psicológico, que
se traducen en un trato humano; Al igual que la autonomía que es el respetar a las
personas como individuos libres y tener en cuenta sus decisiones, producto de sus
valores y convicciones personales. Con este principio se reconoce el deber de
respetar la libertad individual que tiene cada persona para determinar sus propias
acciones. Y por último tenemos la confiabilidad es un principio se refiere a que el
profesional de enfermería se hace merecedor de confianza y respeto por sus
conocimientos y su honestidad al trasmitir información, dar enseñanza, realizar los
procedimientos propios de su profesión y ofrecer servicios o ayuda a las personas.

-Adjunto el documento Decálogo del código de ética para las enfermeras y


enfermeros de México:

Diariamente las enfermeras y enfermeros ya sean laboralmente activos dentro del


equipo de salud o que se esté formando como futuros enfermeros ejercen este
punto del decálogo, pues como compañeros comparten vivencias, experiencias y
conocimientos para poder continuar aprendiendo y así brindar una excelente
atención, este punto se ejerce en las escuelas, ya sea desde un docente hacia su
alumnado, de compañeros a compañeros, o inclusive de compañeros docentes a
otros docentes.

También se lleva en practica en los hospitales, pues entre los mismos compañeros
pueden aprender del uno y el otro, este conocimiento se puede dar desde
observar a tu compañero y a través de compartir é intercambiar conocimientos
adquiridos previamente.

Blancas López Fernando Marcos

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