Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
EL CARMEN DE BOLIVAR
2019
INTRODUCCION
Para tal fin se es necesario contar con la participación de las familias, equipo
interdisciplinario e instituciones garantes de derechos.
JUSTIFICACION
OBJETIVO GENERAL
Adelantar acciones y participar en los espacios de articulación interinstitucional
que promueven el desarrollo integral de las niñas y los niños de Primera Infancia
OBJETIVOS ESPECIFICOS
COMISARIA DE FAMILIA
Es una Entidad Municipal de carácter administrativo e interdisciplinario, que forma
parte del Sistema Nacional de Bienestar Familiar, cuya misión es prevenir,
promover, garantizar, restablecer y proteger los derechos de los miembros de la
familia vulnerados por situaciones de violencia intrafamiliar y las demás
establecidas por la ley, con el apoyo y el trabajo conjunto de todas las instituciones
del municipio, las familias y la comunidad.
ICBF
El Instituto colombiano de Bienestar familiar es la institución del estado
colombiano encargado del desarrollo y la protección de los menores de edad y el
de las familia;, la cual trabaja con calidad y transparencia por el desarrollo y la
protección integral de la primera infancia, la niñez, la adolescencia y el bienestar
de las familias colombianas.
EPS
Las Entidades Prestadoras de Salud (EPS) son empresas que brindan servicios
de salud privada a los trabajadores que están afiliados a ellas, y complementan la
cobertura de las comunidades en las cuales están enmarcadas territorialmente,
haciendo énfasis en el municipio del Carmen de bolívar se cuenta con ; Mutual
Ser, Mutual Quibdo, Endisalud, Medimas, Coosalud, Comfacor etc. .
MARCO LEGAL
Que conforme a la Ley 7ª de 1979, el Decreto número 2388 de 1979 y el Decreto número 1137 de
1999, el Bienestar Familiar es un servicio público a cargo del Estado que se presta a través del
Sistema Nacional de Bienestar Familiar, y tiene como fines promover la integración y realización
armónica de la familia, fortalecer los lazos familiares, asegurar y apoyar el cumplimiento de los
deberes y obligaciones de sus miembros y proteger al niño, niña y adolescente y garantizarle sus
derechos.
Que de acuerdo con la Ley 7ª de 1979, el Decreto número 2388 de 1979 y el Decreto número 1137
de 1999, le corresponde al Sistema Nacional de Bienestar Familiar, vincular y coordinar el mayor
número de personas, entidades públicas o privadas que contribuyan o estén llamadas a contribuir
de acuerdo con su objeto de constitución o por mandato de ley o reglamento, a garantizar directa o
indirectamente la prestación del servicio de bienestar familiar; por lo tanto, se hace necesario
identificar a las entidades que conforman el Sistema Nacional de Bienestar Familiar.
Que la articulación del Sistema Nacional de Bienestar Familiar debe tener observancia de la nueva
organización y funcionamiento del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar a partir de su
adscripción al Departamento Administrativo para la Prosperidad Social, conforme a lo dispuesto en
el Decreto número 4156 de 2011; y atender a criterios especiales debido a la participación que
tienen diversas instituciones públicas y privadas, en los ámbitos nacional, departamental, distrital y
municipal en la prestación del Servicio Público de Bienestar Familiar.
El presente decreto se aplicará a todas las entidades del Estado que formulan, ejecutan y evalúan
políticas públicas de infancia, adolescencia y familia y a todas las instituciones públicas o privadas
que prestan el Servicio Público de Bienestar Familiar cuyo objeto sea el fortalecimiento familiar y la
garantía, protección y restablecimiento de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, así
como la prevención de su amenaza o vulneración, de acuerdo con lo establecido en las Leyes 7ª
de 1979 y 1098 de 2006 y los Decretos números 2388 de 1979 y 1137 de 1999.
En los municipios y distritos, las instancias del Sistema Nacional de Bienestar Familiar son:
PARÁGRAFO 3o. En desarrollo de las funciones de Secretaría Técnica del Consejo Nacional de
Política Social, del Comité Ejecutivo del Sistema Nacional de Bienestar Familiar y de coordinación
técnica de las Mesas Departamentales, Municipales/Distritales de Infancia, Adolescencia y Familia,
el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar brindará el apoyo técnico operativo y de coordinación
interinstitucional que se requiera.
SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN
Procesos y procedimientos
Debido a la mutua implicación que vincula planificar y evaluar, se pone de manifiesto que el
desarrollo de una “cultura de planificación” en nuestra institución implica el paralelo impulso de una
“cultura de la evaluación” que sirva de soporte y fuente de insumos para la primera. Se trata de
promover la evaluación como una oportunidad de aprendizaje institucional e individual,
diferenciando las formas de evaluación y valorándolas como un espacio privilegiado de
crecimiento.
Cuando se orienta desde una perspectiva participativa y de acción social, la evaluación representa
una ocasión de construcción de conocimiento comunitario, profesional, metodológico y estratégico,
a fin de mejorar las prácticas sociales abarcadas por el plan y los proyectos de desarrollo. Para
ello, es importante consolidar prácticas institucionales que valoricen la evaluación, evitando que los
procedimientos de evaluación sean practicados sin regularidad que poco aportan para cambiar la
acción institucional, lo cual constituiría un verdadero desaprovechamiento de su utilidad.
La evaluación nos ofrece información precisa sobre el desempeño de nuestro trabajo conjunto con
las instituciones articuladas al momento de exposición de temáticas de índole según sus
dependencias y por ende identificar así como contribuye a la mejora de nuestra labor al servicio de
los niños y niñas atendidos. Debemos ver la evaluación como una práctica imprescindible que se
impone desde la misión misma para averiguar la fidelidad de nuestra acción con la misión del
POAI. Más allá de la precisión que puedan aportar herramientas técnicas de evaluación, el criterio
fundamental de toda evaluación en nuestro proyecto debe fundamentarse en la perspectiva de los
niños y niñas destinatarios y la transformación de sus condiciones de vida según los principios
orientadores que rigen nuestro proceso de atención y que están consignados en el POAI.
El CDI Construyendo Sueños –Sede Mateo Gomèz, para controlar y verificar que todos los
procesos se estén llevando a cabo como se planearon en este documento, elaboró un sistema de
monitoreo, seguimiento y evaluación.
a. Examinar hasta qué punto se alcanzan los resultados previstos por el plan e identificar los
factores que obstaculizan o contribuyen al logro
d. Investigar los efectos del plan y sus actividades sobre los destinatarios (niños y niñas atendidas
en los entornos comunitario e institucional) a través de formato de evaluación de las formaciones o
participaciones de los mismos.
Manejar y actualizar ágilmente esta información permite introducir ajustes y mejoras a la acción
para que se cumplan los objetivos del plan. Es evidente la importancia de que los datos arrojados
por la evaluación sean consistentes y confiables para fundamentar adecuadamente juicios
valorativos y decisiones.
Los criterios que se usarán para la evaluación y seguimiento proponen un modelo integral de
evaluación de la siguiente manera:
Esta información queda registrada y es analizada con todo el equipo interdisciplinario del CDI, con
el fin de implementar acciones de mejora.
En cuanto al seguimiento, se pretende indagar y analizar el grado en que las actividades realizadas
y los resultados obtenidos responden a lo planificado, con el fin de detectar oportunamente
eventuales deficiencias, obstáculos y/o necesidades de ajuste en la planificación y ejecución.
a. Las actividades: Para una documentación de las actividades realizadas se usará un sistema
sencillo de registros. Se compara lo programado con lo realizado (cumplido, parcialmente
cumplido, etc.) Las discrepancias requieren de una explicación.