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Predecesor Él mismo
(como Rey de Francia y de Navarra)
Predecesor Luis XV
Sucesor Él mismo
(como Rey de los Franceses)
[mostrar]Otros títulos
Información personal
Nombre
Luis Augusto de Francia
secular
(en francés: Louis Auguste de France)
Religión Católico
Familia
Información profesional
Firma
Montjoie Saint-Denis!
Luis XVI de Francia (en francés: Louis XVI; Versalles, 23 de agosto de 1754 – París,
21 de enero de 1793) fue rey de Francia y de Navarra4 entre 1774 y 1789, copríncipe
de Andorra entre 1774 y 1793, y rey de los franceses3 entre 1789 y 1792.2 Fue el último
monarca antes de la caída de la monarquía por la Revolución Francesa, así como el
último que ejerció sus poderes de monarca absoluto. Fue conocido como Ciudadano
Capeto (en francés: citoyen Capet) durante los cuatro meses que precedieron a
su ejecución en la guillotina. Luis XVI se convirtió en delfín de Francia tras la muerte de
su padre y presunto heredero, Luis de Francia. Tras la muerte de su abuelo, el rey Luis
XV el 10 de mayo de 1774, heredó el cargo de rey de Francia y de Navarra que
mantendría hasta 1789, cuando asumió el título de rey de los franceses bajo
una monarquía constitucional. El 21 de septiembre de 1792 se le despojaron todos sus
títulos al ser abolida la monarquía.
Los primeros años de su reinado estuvieron marcados por los intentos de reformar la
administración francesa de acuerdo con las ideas de la Ilustración. Algunas de estas
medidas incluyeron esfuerzos para abolir la servidumbre, la eliminación de
la taille (impuesto sobre los bienes) y la corvée (obligación de trabajar sin remuneración
para el señor feudal) así como el aumento de tolerancia hacia los no católicos y la
abolición de la pena de muerte para los desertores.6 Sin embargo la nobleza
francesa reaccionó a las reformas propuestas con hostilidad y se opuso con éxito a su
implementación. Esto sumado a su falta de carácter y las intrigas de su corte hicieron
que la mayor parte de las reformas ilustradas nunca vieran la luz. Luis implementó
la desregulación del mercado de granos, defendida por su ministro de economía
el liberal Turgot, pero esto acabó en un aumento en los precios del pan. En los
períodos de malas cosechas, condujo a la escasez de alimentos que, durante una
cosecha particularmente mala en 1775, llevó a las masas a rebelarse. Desde 1776,
Luis XVI apoyó activamente a los colonos norteamericanos, que buscaban su
independencia de Gran Bretaña, que se concretó en el Tratado de París de 1783. Para
evitar la bancarrota del país causadas principalmente por las malas cosechas y la
escasez de alimentos, sus ministros Turgot, Necker y Calonne intentaron en seis
ocasiones (1774-1776, 1781 y cuatro en 1787) realizar profundas reformas
estructurales y fiscales. La nobleza de toga del Parlamento de París y la corte
de Versalles se negaron a tales reformas, haciendo al rey tener que presentar sus
propuestas ante una Asamblea de Notables y más tarde ante los Estados
Generales para aprobarlas. En los Estados Generales de 1789, el Tercer Estado, al
que no se le concedió el voto por persona que solicitaba, se autoproclamó Asamblea
Nacional, jurando no disolverse hasta dar una Constitución a Francia. El descontento
entre los miembros de las clases media y baja de Francia dio como resultado una
fuerte oposición a la aristocracia francesa y a la monarquía absoluta, de la que Luis y
su esposa, la reina María Antonieta, eran vistos como representantes. El aumento de
las tensiones y la violencia estuvieron marcadas por eventos como la toma de la
Bastilla, durante el cual los disturbios en París obligaron a Luis a reconocer
definitivamente la autoridad legislativa de la Asamblea Nacional.
La indecisión y el conservadurismo de Luis llevaron a algunos elementos del pueblo de
Francia a verlo como un símbolo de la tiranía percibida del Antiguo Régimen, y su
popularidad se deterioró progresivamente. Su fallida huida a Varennes en junio de
1791, cuatro meses antes de que se declarara la monarquía constitucional, parecía
justificar los rumores de que el rey vinculaba sus esperanzas de salvación política a las
perspectivas de una intervención extranjera. La credibilidad del rey se vio
profundamente minada y la abolición de la monarquía y el establecimiento de una
república se convirtieron en una posibilidad cada vez mayor. El crecimiento del
anticlericalismo entre los revolucionarios resultó en la abolición del dîme (impuesto
territorial religioso) y varias políticas gubernamentales destinadas a
la descristianización de Francia. En un ambiente de caos nacional provocado por
la guerra civil e internacional, tras la fuga de Varennes, Luis llevado de vuelta a París y
suspendido de sus funciones. A pesar de que hubo un movimiento republicano que
exigió que el rey fuera castigado, el monarca firmó la Constitución de 1791 y fue
repuesto en sus funciones. En un asalto a las Tullerías, en la jornada del 10 de agosto
de 1792 fue arrestado (arresto motivado por su negativa a enviar soldados a luchar
contra Austria y Prusia),7 puesto a disposición de la nueva Convención Nacional (en
sustitución de la Asamblea Nacional Legislativa) y procesado. Fue condenado por alta
traición y condenado a pena de muerte. Fue guillotinado el 21 de enero de 1793, como
ciudadano francés desacralizado bajo el nombre de citoyan Capet en referencia a Hugo
Capeto, fundador de la dinastía borbónica. Luis XVI fue el único rey de Francia en ser
ejecutado, y su muerte puso fin a más de mil años de monarquía francesa continua.
Sus dos hijos murieron en la infancia, antes de la Restauración borbónica; su única hija
en llegar a la edad adulta, María Teresa, fue entregada a los austriacos a cambio de
prisioneros de guerra franceses, y finalmente murió sin descendencia en 1851.
Índice
• 1Biografía
o 1.1Infancia y juventud
o 1.2Matrimonio
o 1.3Ascenso al trono y reinado
▪ 1.3.1Ministerio de Turgot
▪ 1.3.2Ministerio de Necker
▪ 1.3.3Ministerio de Calonne
▪ 1.3.4Política exterior
▪ 1.3.4.1La Guerra de
Independencia de los
Estados Unidos
▪ 1.3.4.2Relaciones con
Austria
▪ 1.3.5Los Estados Generales
o 1.4La Revolución
o 1.5Ciudadano Luis Capeto
▪ 1.5.1Reclusión en la torre del Temple
▪ 1.5.2Proceso
o 1.6Ejecución
▪ 1.6.1Reliquias
▪ 1.6.2Las reacciones a la ejecución del
monarca
• 2Personalidad
• 3Ancestros
• 4Legado
o 4.1En cine y literatura
• 5Títulos
• 6Condecoraciones
o 6.1Órdenes francesas
o 6.2Órdenes extranjeras
• 7Ancestros
• 8Véase también
• 9Referencias y notas
• 10Bibliografía
• 11Enlaces externos
Biografía[editar]
Infancia y juventud[editar]
Nacido como Luis Augusto de Francia (Louis Auguste de France), duque de Berry, fue
el cuarto hijo del delfín Luis Fernando y María Josefa de Sajonia. La segunda esposa
del delfín era hija de Federico Augusto III, rey de Polonia. En el momento de su
nacimiento, su padre y su hermano Luis José Javier (nacido en 1751 y fallecido en
1761) le precedían en la línea de sucesión, por lo que nunca se creyó que llegara al
trono. Sus otros hermanos fueron María Teresa (1746-1748), hija del primer matrimonio
de su padre con María Teresa de España y fallecida a los dos años de edad; María
Ceferina (1750-1755), fallecida a los cinco años; Javier María (1753-1754), fallecido al
año de edad; Luis Estanislao (1755-1824), conocido como conde de Provenza (durante
la Revolución se exilió y tras la caída de Napoleón subió al trono como Luis XVIII,
iniciando así la Restauración); Carlos Felipe (1757-1836), conocido como conde de
Artois (subió al trono como Carlos X, sucediendo a su hermano Luis
XVIII); Clotilde (1759-1802), reina consorte de Cerdeña; e Isabel (1764-1794), conocida
como Madame Isabel.
Luis fue confiado a Marie Louise, condesa de Marsan y princesa de Rohan, quien lo
apartó de la corte y se lo llevó al palacio de Bellevue, colmándolo de cuidados y,
probablemente, salvándole la vida.8 A los seis años debió ser separado de su nodriza y
traído junto a los hombres, lo que le causó una gran tristeza que intentaron aliviarle con
juguetes y otras distracciones, como fuegos artificiales, que no surtieron efecto.9 Su
padre eligió personalmente a los hombres encargados de educarlo: el duque de La
Vauguyon fue escogido como gobernador; Jean-Gilles du Coëtlosquet, obispo de
Limoges como preceptor; el marqués de Sinety como vicegobernador y el abad de
Radonvillers para realizar las tareas esenciales del vicepreceptor. Su padre desechó el
método educativo mayoritario en la época, que reducía a entretenimiento y diversión la
instrucción, y abogó por el trabajo y el esfuerzo, lo que no combatió su predisposición a
una extrema timidez y a un carácter reservado, que se convirtieron en un defecto. 10
Luis (a la derecha) y su hermano, el conde de Provenza (a la izquierda) en su infancia, pintados por François
Hubert Drouais.
Detestando los falsos cumplidos, no correspondía a los que se los dedicaban, y éstos
lo aislaban, lo que le produjo una fuerte inseguridad en sí mismo y una exagerada
modestia,10 hasta el punto de que, en una ocasión, al elogiarle un arengador de
provincias por sus cualidades precoces, respondió: «Os equivocáis, señor, yo no soy el
que posee [el] espíritu, es mi hermano [el conde] de Provenza». 11
Su tía y madrina, la princesa María Adelaida, desarrolló un gran afecto por él, y se
gustaba de llevarlo a su casa, donde más de una vez le dijo: «Vamos, mi pobre [duque
de] Berry, estáte a tu gusto, tienes los codos libres: habla, grita, haz ruido, te doy carta
blanca».11
El ya delfín (tras la muerte de su padre en 1765) recibió una exquisita enseñanza, por
parte del jesuita Berthier12 y, por supuesto, del duque de La Vauguyon, la cual dio unos
espléndidos resultados: el delfín Luis Augusto conocía el latín, el italiano le era tan
familiar como su lengua materna, hablaba el alemán pasablemente y dominaba
el inglés, traduciendo de este último L'histoire de Charles Ier (La historia de Carlos I),
de David Hume; Doutes historiques sur les crimes imputés à Richard III (Dudas
históricas sobre los crímenes imputados a Ricardo III), de Horace Walpole y los cinco
primeros volúmenes de Décadence de l'Empire romain (Decadencia del Imperio
romano), de Gibbon, los cuales fueron impresos y editados.13 El duque de La Vauguyon
era consciente de que debía prepararle para insuflarle fuerzas a la monarquía, que se
encontraba muy debilitada y para «curar todas las "heridas" de Francia con rapidez y
precisión», no solo educándolo con los conocimientos elementales, sino «enseñándole
a conocer a los hombres».14
Recibió una educación propia de un «príncipe de las Luces», y se le consideraba «un
monarca iluminado».15 Practicaba la lógica, la gramática, la retórica, la geometría y
la astronomía.16 Tenía unos conocimientos históricos y geográficos incontestables
(diseñó él mismo un atlas de rigurosa precisión)17 y competencias económicas.16
Estuvo muy influenciado por Montesquieu, quien le inspiró una concepción moderna de
la monarquía, libre del derecho divino.16
Matrimonio[editar]
María Antonieta como delfina de Francia, retratada por Joseph Ducreux (1769).
Tras enfermar de viruela negra y sufrir una lenta agonía, Luis XV murió el 10 de mayo
de 1774. Al saberse de la muerte del rey, una gran multitud acudió a los aposentos de
los hasta entonces delfines de Francia y, entrando en los mismos, se dirigieron a la
pareja como Sus Majestades. Tanto Luis XVI como María Antonieta quedaron
impactados y, arrodillándose exclamaron: «¡Oh, Dios mío! Vamos a reinar demasiado
jóvenes. ¡Dios mío, guíanos y protégenos de nuestra inexperiencia!» 25
La primera medida que tomó el joven Luis XVI como rey fue despedir a los ministros
más odiados por la opinión pública; el duque de Aiguillon y el abad de Terray fueron
descartados. Sin embargo, el soberano se dio cuenta de que necesitaba tener a
alguien a su lado que lo guiase en su difícil tarea. Tras descartar al duque de
Choiseul y a Machault, el rey se decantó por Maurepas.26
Una de las decisiones más importantes que debía tomar el monarca era la de restaurar
o no el Parlamento de París, abolido por el ministro de su abuelo, Maupeou, quien lo
sustituyó por los seis Tribunales Superiores de Arrás, Blois, Clermont-
Ferrand, Lyon, París y Poitiers. Finalmente, Luis XVI tomó la decisión de restaurarlos,
permitiéndose el regreso de los miembros exiliados del parlamento, que pudieron
recobrar sus puestos.27
El conde de Vergennes fue encargado de los Asuntos Exteriores, el conde de Muy de
los de Guerra, Antoine de Sartine de los de la Marina, Jacques Turgot fue
designado Controlador General de las Finanzas (equivalente a ministro de
Economía), Malesherbes fue destinado al departamento de París y Armand Thomas
Hue de Miromesnil fue nombrado guardián del sello de Francia (el equivalente a
un ministro de Justicia).27
Tras un periodo de debate sobre la celebración de la ceremonia de consagración del
soberano, considerada un acto propio de la servidumbre feudal por diversos sectores
(el mismo ministro Turgot era de esta opinión),28 el 11 de junio de 1775 se llevó a cabo
en la catedral de Reims. La coronación se realizó utilizando el procedimiento empleado
desde la consagración de Pipino el Breve. El rey fue ungido por el arzobispo de
Reims y recibió del mismo los atributos reales: el anillo real, el cetro, la Mano de
justicia y la corona.29 Un gran número de enfermos (principalmente, escrofulosos)
venidos de toda Francia acudieron para que el recién ungido monarca les impusiera las
manos y rogara a Dios por su sanación. El gasto de la ceremonia no excedió la suma
de 180 000 francos.30
El famoso Hôtel-Dieu de París, fundado en el año 661 y dedicado durante más de un
milenio a la caridad y el cuidado de los enfermos, se encontraba en una situación
deplorable, pues había sufrido un incendio en 1772.31 Aunque se planeó la
construcción de cuatro hospitales en la capital en sustitución del añejo Hôtel-Dieu, el
déficit de las arcas no lo permitió; los distintos edificios que conformaban la milenaria
institución fueron considerablemente reformados y ampliados.31 El 14 de diciembre de
1774 se coloca la primera piedra del nuevo edificio de la Escuela de Medicina de
París en la rivera del río Sena.32 Más tarde se dedicó a mejorar la Justicia. Liberó a un
gran número de hombres encarcelados por razón de Estado, hizo revisar
el Código para eliminar los apartados más severos, en 1780 abolió la question
préparatoire (acción de tortura) y reguló los atenuantes de la pena por deserción.32
El reinado de Luis XVI está marcado por numerosas tentativas de reformas económicas
e institucionales en la línea de la reforma iniciada por René Nicolás Carlos Agustín de
Maupeou (1771) bajo el reinado de Luis XV. Luis XVI restaura los Parlamentos. Por lo
menos en cuatro ocasiones (Turgot, Necker, Calonne, Brienne y de nuevo Necker)
intenta llevar a cabo reformas más o menos profundas del reino, y más
específicamente, el establecimiento de un impuesto igualitario. En cada ocasión se
topa con la oposición de los privilegiados (la mayoría de la nobleza y una parte del
clero) y sus círculos más próximos (la corte, la reina...). Los Parlamentos, formados por
la nobleza de toga, aferrada al mantenimiento de los privilegios, también se oponen, y
Luis no piensa en exceder los poderes que le dan las leyes fundamentales del reino,
por lo que tiene que hacer avalar sus reformas. Espera lograr instaurar sus reformas en
los Estados Generales, los cuales son convocados en 1789.
Si la paralización de sus reformas por parte de la nobleza y el alto clero es su mayor
obstáculo político, su mayor problema económico es el creciente déficit. Entonces
piensa que la única forma de acabar con él es tomar medidas que comprometan los
privilegios de las clases altas. Los Estados Generales, convocados por su primer
ministro para intentar llevarlas a cabo lo más apaciblemente posible, escapan
rápidamente de su control.
Ministerio de Turgot[editar]
Luis XVI
Jacques Turgot.
Jacques Turgot es nombrado por Luis XVI controlador general de las finanzas.
Turgot se lanza entonces a un proyecto "revolucionario" de creación de un sistema de
asambleas con estructura piramidal, elegidas por el pueblo: municipalidades en los
municipios, distritos en provincias y finalmente una municipalidad de reino. Como
explica en 1854 el historiador Victor Duruy: «Había novedades muy grandes; Turgot
planeaba otras más temibles: eliminación de las cargas que asfixiaban a los pobres,
establecimiento sobre los nobles y el clero de un impuesto territorial; pero mejora de la
situación de los curas y vicarios, que poseían la porción más pequeña de las rentas de
la Iglesia y supresión de la inmensa mayoría de los monasterios, igual participación en
el impuesto a través de la creación de un catastro, libertad de pensamiento para los
protestantes, rescate de las rentas feudales, el mismo sistema de peso y medida para
todo el reino, libertad de pensamiento también para la industria y el comercio y
finalmente, como Turgot se ocupaba de necesidades morales y materiales, un vasto
plan de instrucción pública para difundir las Luces (los principios de la ilustración)».33
Se formó una gran coalición de individuos, cuyos intereses se veían perjudicados por
las reformas, contra Turgot: poseedores del monopolio del grano, parlamentarios
pertenecientes a la nobleza de toga, privilegiados..., etc. A esta coalición se unieron los
allegados del rey (el ministro Maurepas y la reina María Antonieta). El rey intentó
resistir a los privilegiados, su ministro y a la reina, con el fin de mantener los planes de
Turgot. En marzo de 1776 declara: «Veo que sólo Turgot y yo amamos al pueblo.» 34
Hubo graves disturbios: en casi toda Francia, estallaron revueltas populares por el
precio de la harina (llamadas la guerra de la harina), probablemente organizadas por
algún príncipe de sangre, que junto a la rica burguesía eran perjudicados por las
reformas económicas,35 los cuales espolearon al ya molesto pueblo hambriento.
Tras dos años de resistencia, Luis XVI y sus ministros reformistas cedieron a las
presiones. Malesherbes dimitió y el soberano se vio obligado a cesar a Turgot el 12 de
mayo de 1776 y desbaratar sus reformas.36
Ministerio de Necker[editar]
Jacques Necker.
El sustituto de Turgot murió varios meses después del cese. En octubre de 1776, Luis
XVI nombró a Jacques Necker director de finanzas (el equivalente a controlador
general de las finanzas). Era una elección triplemente vanguardista: Necker
era plebeyo, extranjero (ginebrino) y protestante.
Luis XVI y Necker volvieron a las reformas esenciales, el ministerio de Necker está
caracterizado así por la liberación de los últimos siervos del reino, por una ordenanza
del 8 de agosto de 1779.37 Esta ordenanza estuvo favorecida por Voltaire, que en 1778
apoyó la causa de los siervos del Mont-Jura y la abadía de Saint-Claude.37 Sin
embargo, la ordenanza apenas fue aplicada y la servidumbre persistió localmente hasta
la Revolución, cuando sería eliminada con la abolición de los privilegios la noche del 4
de agosto de 1789.37
Abolió además la pregunta previa (aplicada a los condenados a muerte). También
proyectaba una organización de asambleas provinciales, pero con un fin meramente
financiero.38
Luego de la publicación por parte de Necker de la rendición de cuentas del estado de
las finanzas en 1781, la "guerra" que tan buen resultado dio con Turgot comenzó con
su sucesor. El Parlamento rechazó el edicto que restablecía las asambleas
provinciales, y los cortesanos, viendo mermados sus presupuestos, usaron la calumnia
para socavar la autoridad del rey y de sus ministros. El monarca y Necker no pudieron
permanecer demasiado tiempo soportando la oposición de los privilegiados, por lo que
Necker presentó su dimisión, que fue aceptada el 21 de mayo de 1781. 39
Un edicto del 8 de agosto de 1779 autorizaba a las mujeres casadas, los mineros y
los monjes a gastar la pensión sin requirimiento de autorización (del marido en el caso
de la mujer casada).40
Ministerio de Calonne[editar]
Luis XVI nombró a Charles Alexandre de Calonne, con reputación de buen técnico de
las finanzas, como inspector general de las finanzas (noviembre de 1783) y luego
ministro de Estado para reemplazar a Necker. Calonne llevó a cabo durante tres años
una política de gastos y préstamos, de "reactivación" según algunos (grandes trabajos
en transportes, la industria, el tratado de comercio con Inglaterra en 1786) destinada a
recuperar el crédito del Estado.
Pero fue en falso, Calonne tuvo que volver al mismo plan de reformas de sus
predecesores: liberalizar el comercio interior eliminando las aduanas interiores, suprimir
los tratados, reducir la talla, reemplazar las corveas reales (trabajos gratuitos de
plebeyos para la Corona, en naturaleza, medievales) por un impuesto metálico,
transformar la Caja de descuento en un banco estatal y sobre todo «someter a los
privilegiados a un impuesto y a la subvención territorial; establecer las asambleas
provinciales», elegidas, que repartirían este impuesto. Así como Turgot, Calonne
pretendía crear una pirámide de asambleas locales (asambleas parroquiales,
asambleas municipales y asambleas de distrito) elegidas por los contribuyentes.
Luis XVI le dijo a Calonne: «¡Es puramente de Necker lo que usted me propone!», pero
el plan era más parecido al de Turgot. Uno de los principales redactores del proyecto
era el fisiócrata Pierre Samuel du Pont de Nemours, antiguo colaborador de Turgot.
Para no enfrentarse con la minoría noble de toga del Parlamento, que siempre
rechazaba las reformas, el gobierno tuvo que convocar una asamblea de 144 notables
(también privilegiados) para llevar a cabo su proyecto. Pero reunida en febrero-marzo
de 1787 deniega el impuesto territorial igualitario. El monarca, que había mantenido su
apoyo a Calonne durante varios meses, lo retira bruscamente en abril de ese mismo
año,41 posiblemente bajo la influencia de la corte, la reina o la opinión pública.
En enero de 1787, Luis XVI abolió el peaje personal que debían pagar los judíos
de Alsacia.42
Política exterior[editar]
El rey decidió guarnecer América enviando numerosas tropas, compuestas en parte por
nobles cortesanos, en ayuda del general Washington. El 1781 fue un año rico en
acontecimientos: en América tuvieron lugar numerosas victorias durante el asedio de
Yorktown, y en Francia, el 22 de octubre María Antonieta dio a luz al tan deseado
delfín, Luis José. Otro hecho importante fue la muerte de Maurepas el 21 de
noviembre. Los cortesanos se preguntaron entonces quién sería el sucesor, mas el
soberano lo aclaró todo al decir las siguientes palabras: "J'entends régner" (yo pienso
reinar).44
El 2 de febrero, la flota franco-española reconquistó Menorca al derrotar a la flota
inglesa. En la noche del 8 al 9 de abril, Luis XVI se comprometió a calmar una
sublevación burguesa en Ginebra dejando bajo los principios del absolutismo,
olvidando que estaba luchando en América por la libertad y la igualdad.45 Como
consecuencia de este acontecimiento, los delegados del Congreso
americano, Benjamin Franklin, John Adams y John Jay, rechazaron los acuerdos con
Francia y firmaron una paz separada con Inglaterra, lo que hizo montar en cólera al rey
francés, que ordenó a Vergennes reprender a Franklin.
Finalmente, el 20 de enero de 1783 se llegó a un acuerdo cuando los delegados
franceses, españoles, norteamericanos e ingleses se reunieron en la Sala del Consejo
del palacio de Versalles. La firma del acuerdo trajo consigo la obtención por parte de
Francia del Senegal, algunas islas caribeñas y de escalas comerciales en
la India y Dunkerque, mas los franceses perdieron seis millones de libras acordados
inicialmente con los americanos, con lo que se agravó la crisis financiera del Estado. El
déficit llegó a los 80 millones de libras.46
Relaciones con Austria[editar]
José II de Habsburgo.
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Existen desacuerdos sobre la neutralidad en el punto de vista de la versión
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XVI y María Antonieta.
En la página de discusión puedes consultar el debate al respecto.
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En las semanas que siguieron, las familias más conservadoras, como los Artois o
los Polignac, huyeron del país por miedo a ser asesinados. El 17 de julio, Luis XVI
partió hacia París, aunque la reina intentó por todos los modos hacerlo desistir: la
consideraba una acción humillante y peligrosa no habiendo esperanza de volverlo a ver
vivo. El rey volvió a Versalles. Había apoyado la revolución de París y llevaba sobre el
sombrero la escarapela tricolor, símbolo de la unión de la monarquía y la nación. 53
El 29 de julio, a petición del pueblo, Necker volvió y fue nombrado Primer Ministro de
Hacienda.54
Mientras tanto, el miedo a una reacción militar de los nobles emigrados, la hambruna y
el desconcierto frente a los acontecimientos parisinos provocaron en toda Francia una
serie de revueltas campesinas conocidas como el Gran Miedo, dirigidas casi
exclusivamente en detrimento de la nobleza. Para poner remedio, el 4 de agosto, la
Asamblea votó la abolición de los derechos feudales y la igualdad de todos los
ciudadanos ante la ley, poniendo fin al feudalismo. El rey montó en cólera, puesto que
su persona estaba en la cúspide de la misma sociedad estamental que los
revolucionarios querían subvertir con sus reivindicaciones de igualdad. El 1 de octubre,
en el palacio de Versalles se dio una cena en honor a los regimientos de Flandes, pero
en París se filtró la noticia de que era en realidad una reunión antirrevolucionaria. 55 El 5
de octubre, una muchedumbre armada compuesta en su mayoría de mujeres marchó
sobre Versalles para pedirle pan al rey y presentarle una petición con la esperanza de
que la situación se resolviera. La mañana del 6 de octubre las habitaciones reales
fueron invadidas y hubo muertos entre los guardias y los civiles. La familia fue obligada
entonces a trasladarse a París, al palacio de las Tullerías, bajo vigilancia de la Guardia
Nacional.
María Antonieta retratada por Kucharsky poco antes de la fuga a Varennes. En la parte baja izquierda se
puede apreciar el golpe de bayoneta que un revolucionario le asestó a la pintura.
Moneda francesa de 1791. En el anverso aparece el busto del rey con la inscripción: «Louis XVI. Roi des
Français». En el reverso aparecen el fascio y el gorro frigio, ambos símbolos propios de la Asamblea Nacional
Constituyente que pasarían a asociarse completamente con la República francesa.
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En el Temple, la familia real fue separada de sus acompañantes, entre los cuales
estaba la princesa de Lamballe; esta última moriría durante las matanzas de
septiembre. Solo a Hanet Cléry, uno de los criados del delfín, se le autorizó a
permanecer junto a ellos, incluso cuando las condiciones de arresto empeoraron. Ante
el temor de que la familia real pudiera mantener una correspondencia oculta se
tomaron varias medidas. Pero a pesar de ello, Cléry consiguió informar de las noticias
que había escuchado en el exterior cuando venía a peinar al rey o a las señoras.
Después, cada tarde, los fieles realistas hicieron gritar a un vendedor de periódicos las
noticias del día justo debajo de las paredes del Temple.69
Durante el periodo de reclusión del rey, además de hacer de profesor de su hijo y de
jugar con él dedicó sus últimos días a leer los libros que se encontraban en la biblioteca
de la torre: mil quinientos volúmenes que constituían el archivo de los caballeros de
Malta. Leía aproximadamente un libro al día, frunciendo el ceño cuando leía
a Voltaire y Rousseau, afirmando que hubieran sido la ruina de Francia.70 Luis también
tuvo que soportar varias groserías por parte de los guardias, que además de empezar
por llamarlo Monsieur (Señor) o incluso Louis (Luis) en vez de Majesté (Majestad),70
ensuciaron las paredes exteriores de la torres con dibujos obscenos o pintadas
amenazadoras.71 El 21 de septiembre, los prisioneros sintieron un gran clamor que
venía de la ciudad. Desde el exterior una voz imperiosa proclamó que la monarquía
había sido abolida oficialmente y había nacido la República. La reina se acostó
sintiéndose desgraciada y el rey ni siquiera interrumpió su lectura.
Proceso[editar]
Mientras tanto se inició el debate sobre la suerte que debía correr el soberano. Se creía
que, mientras estuviese vivo, constituiría el pretexto para una contrarrevolución. Se
crearon así dos comisiones: una con el encargo de investigar los documentos
encontrados en las Tullerías y la otra con el deber de establecer si Luis Capeto,
declarado inviolable por la Constitución, podía ser procesado.
El 6 de noviembre la inmunidad del soberano fue revocada, con lo que el exmonarca
pudo ser puesto bajo proceso de la Convención. El 19 de noviembre fue descubierto
el armario de hierro, escondite de la correspondencia entre Luis XVI y los soberanos
extranjeros. Después de tal hallazgo, algunos diputados, como Robespierre o Saint-
Just, declararon su deseo de querer castigar al ciudadano Luis Capeto sin proceso
alguno, pero la mayoría de la Convención optó en cambio por un proceso regular, para
que Francia y los países extranjeros no dudaran de la legalidad del veredicto.
Litografía ficticia de Luis XVII. Luis Carlos se convirtió en Luis XVII para los monárquicos tras la muerte de su
padre.
Personalidad[editar]
Luis XVI no trabajaba metódicamente a diario, sino que más bien se concedía
numerosos descansos, durante los que leía cuentos de viajes, consultaba mapas
geográficos, se dedicaba a estudios de topografía, de física o de química. Asimismo, se
entretenía planificando el recorrido cotidiano de las batidas de caza, una de sus
grandes pasiones. La otra gran pasión del rey era montar y arreglar cerraduras y
forjar llaves y candados junto a Gamain, el herrero real y Poux-Landry, un experto
en mecánica. Todo el trabajo con cerraduras y llaves se realizaba en
una fragua instalada en el interior de su biblioteca personal. Los cortesanos,
comenzando por la misma reina María Antonieta, se sorprendían al verlo enfrascado en
tareas tan «bajas». Se han elaborado dos hipótesis para explicar este comportamiento
a priori, tan extraño:
Ancestros[editar]
[mostrar]Ancestros
de Luis XVI de
Francia
Legado[editar]
Cenotafio de Luis XVI y María Antonieta en Saint-Denis.
Robert Enrico
1989 Historia de una revolución Jean-François Balmer
Richard T. Heffron
Títulos[editar]
Sucesor:
Predecesor: Abolición del
Rey de Francia y de
Luis XV título
Navarra (él mismo como rey
Copríncipe de de los franceses)
Andorra95
1774-1789
Predecesor: Sucesor:
Nuevo título Abolición del
(él mismo como rey título
de Francia y de (Primera República
Navarra) Rey de los franceses Francesa)
1789-1792
Sucesor:
Predecesor: Luis XVII
(Rey titular de
Abolición de la Rey titular de Francia y Navarra)
monarquía Francia y de Napoleón
(él mismo como rey Navarra
de los franceses) Bonaparte
Copríncipe de (copríncipe de
Andorra)
Andorra
1792-1793
Predecesor: Sucesor:
Delfín de Francia
Luis Fernando Luis José de
1765-1774
de Francia Francia
Predecesor: Sucesor:
Carlos de Duque de Berry Carlos Felipe
Borbón y 1754-1765 de Borbón y
Baviera Sajonia
Condecoraciones[editar]
Órdenes francesas[editar]
• Gran maestre de la Orden del Espíritu Santo
• Gran maestre de la Orden de San Miguel
• Gran maestre de la Orden de San Luis
Órdenes extranjeras[editar]
• Caballero de la Orden del Toisón de Oro (Reino de
España)
Ancestros[editar]
4. Luis XV de Francia
2. Luis de Francia
5. María Leszczynska
1. Luis XVI De
Francia