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ESTRENE LA VIDA TODOS LOS DÍAS (CLINICA DEL ALMA) 14-09-2013

Introducción:

Antes de entrar en detalle en la palabra quisiera aclarar tres conceptos importantes para que el mensaje llegue más
claro, pues nosotros los seres humanos estamos compuestos de tres elementos; el cuerpo, el espíritu y el alma.
Nuestro cuerpo es la parte material física que podemos observar, al dejar de existir el mismo se vuelve polvo, el
espíritu ¿Qué es el espíritu?  En un  lenguaje sencillo, no es más que el hálito de vida, es decir la esencia de la vida
misma Génesis 2:7, el espíritu no muere nunca sino que vuelve a Dios: Job 34:14, Salmo 31:5, Eclesiastés
12:7. Y el Alma es la otra parte del ser humano, es inmaterial que es capaz de sentir, pensar y actuar.   Podemos decir
que es en el alma, en donde está la  mente (intelecto), la voluntad y las emociones;  lo cual quiere decir que cuando
una persona dice “me duele hasta el alma”, está en lo cierto, porque todas aquellas heridas emocionales que hemos
sufrido, y que no han sanado son huellas que han quedado en lo más profundo de nuestro ser (en el alma).  El espíritu
es el que da vida, pero al final es el alma quién toma las decisiones y el cuerpo es quien las obedece.

En nuestros días el hombre (estoy hablando del género) se interesa mucho en cuidar y mejorar su aspecto físico.
Incluso existen clínicas especializadas para rejuvenecer la piel o para cambiar rasgos físicos con el bisturí; y puede
ser que esto no este mal, pero pudiera ser mejor…Casi nadie se preocupa por su interior (el alma) y los resultados
son personas que sufren y hacen sufrir… o en nuestros días alguien podría negar el hecho de la violencia en la
familia, violencia sexual, las adicciones, los robos, los asesinatos, incluso la extrema pobreza y hasta la guerra.
Nosotros, estamos aquí para cultivar este nuestro ser interior y una vez cultivado podamos enseñar, instruir y
capacitar a otras personas para que todo aquello cese. Para que aquellas personas conozcan el verdadero poder
transformador.

 Borrar los errores del pasado, dejar atrás los fracasos, poner en el olvido las heridas y decepciones sin que su
recuerdo nos atormenten… en breve, estrenar la vida, esto sería un asunto maravilloso para muchas personas. En
particular cuando ese pasado impide disfrutar del presente y construir el futuro.

 Pues bien, la buena noticia, para todos los nuevos y los antiguos en la fe, es que esto es lo que hace Dios. El TEMA
que hablaremos se llama estrenar la vida todos los días, y el PROPÓSITO es instruirnos sobre cómo aprovechar la
segunda oportunidad que recibimos del Señor.

Ahora les voy a contar una historia de un pastor, que en cada verano dirigía un campamento para jóvenes y niños y
cada mañana empezaba el día con una breve historia en el que trataba de incluir un elemento de la palabra; para
ilustrar la idea de que convertirse en creyente significa transformarse en una nueva criatura en Cristo. Él relató el
cuento de un alce que quería ser caballo, el alce había visto una manada de caballos salvajes y pensó que eran
criaturas elegantes y quiso ser como ellos. Entonces aprendió a actuar como un caballo, sin embargo nunca lo
aceptaron como tal... ¿Por que?...bueno era un alce. ¿Cómo puede un alce convertirse en caballo? Solamente si
nace caballo…por supuesto. Entonces les explico de cómo podemos nacer de nuevo si creemos en Jesús. Un
verano tenía un consejero en el equipo de trabajo, llamado Juan, una persona que era muy hostil a la fe lo único
que podía hacer el pastor era amarlo y orar por el. Pero al terminar el verano se fue endurecido por su
incredulidad. Esta historia que les estoy contando paso hace mas de 30 años, y hace poco el pastor recibió una
carta de Juan en la que las primeras líneas decía “Le escribo para decirle que nací de nuevo y que ahora, por fin soy
un caballo”. Esto confirma una vez más que debemos seguir orando y plantando la semilla de la palabra, que es lo
que estamos haciendo hoy.

 Ahora bien, para comenzar, leeremos una declaración definitiva que describe la situación del que acaba de recibir
a Cristo. Leamos el TEXTO en 2da. de Corintios 5:17-19
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son
hechas nuevas. Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio
el ministerio de la reconciliación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no
tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la
reconciliación”.
Examinemos que significa para nosotros:
1. DIOS DA VIDA NUEVA A QUIEN CREE EN ÉL
La vida que llevamos antes de llegar a Cristo, desgasta, envejece y destruye el alma. Lo más probable es que el
mundo haya dejado una serie de cicatrices en el interior de cada uno.
 En algunos casos, son heridas abiertas que duelen cada vez que alguna situación nos recuerda el pasado. Hay
tristezas y hasta depresión.
 En otros casos, son como marcas que han alterado la personalidad de la persona produciendo amargura,
rencor, enojo y hasta odio.
 Adicionalmente, y tal vez no lo queramos admitir, cada uno también tenemos acumulado un paquete, o un
rollo de culpas por haber maltratado a otros.

Pero para el que cree en Cristo Jesús, ha tenido lugar algo extraordinario: ha nacido como hombre nuevo, un
ser espiritual. Este conocimiento genera ganas de vivir un estilo de vida diferente, empezando con una
disposición de perdonar a los que nos lastimaron y pedir perdón a quienes hicimos daño. Ambas cosas serán
posibles para el hombre nuevo.

2. DIOS DA COSAS NUEVAS A QUIEN CREE EN ÉL


Como hombres de carne y hueso nacimos en determinadas circunstancias sociales y dentro de un ambiente
definido de este mundo. Nacer de nuevo es como abrir una puerta hacia lugares cuya existencia ignorábamos y
que estuvieron cerrados para nosotros. Pero como criaturas hechas de nuevo tenemos acceso libre a los tesoros
extraordinarios que Dios nos da:
 Una nueva forma de vida, que no está sujeta al pecado, ni a la muerte. Y tan abundante que es eterna como lo
dice la palabra en Juan 3:16. Es libre para la comunión con Dios, porque nos concedió estar en paz con Él (v.
18). El hombre sin Dios ve y juzga al mundo a través de una perspectiva material. Jesús quita la venda que te
impide ver de manera espiritual.
 Una nueva familia con Dios como Padre que nos cuida y protege, y una herencia espiritual que podemos
empezar a gozar desde ya y para siempre Juan 1:12-13

“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos
hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de
varón, sino de Dios”. Hay quienes han sido humillados y burlados; quienes están en miseria física o bajeza
moral. Pero no importa lo que eres, hiciste o sufriste, Jesús te ha hecho hijo de Dios, y eso…eso es lo máximo
que se puede lograr en la vida. Además, esta una familia grande… de muchos hermanos.
 Una nueva posición frente a la vida porque cuando nos entregamos a Cristo, hay todas las razones para tener
esperanza, y la esperanza da origen a emociones, sentimientos, actitudes y decisiones nuevas. Tus sentimientos
heridos, el dolor de tu corazón, las lágrimas en tus ojos…Jesús transforma tu tristeza interior en sabiduría y
fortaleza, En Filipenses 4:13 dice “todo lo puedo en Cristo que me fortalece”…
El centro de todo pecado está el no amar a Dios plenamente y el no querernos someter a su divina voluntad y a
su guía para nuestras vidas. Esa falta de sumisión equivale a aliarse con Satanás y adoptar la idea de que somos
más sabios que Dios y por lo tanto podemos decidir por nosotros mismos cómo debemos vivir nuestras vidas.

El hombre sin Dios es preso de sus propios deseos, trata de realizar todo sin mirar las consecuencias que sus
actos tengan para Él y los demás. Jesús te libera de las actitudes que te han traído desgracias y problemas.
Si hasta hoy tu alma estuvo opacada por tu vida pasada, Jesús convierte tu tristeza en gozo y tu espíritu
angustiado en un espíritu de alegría.

Conclusión: Si hay esperanza, usted puede estrenar cada día nuevo como una oportunidad de gozar la vida, desde
adentro hacia afuera, porque tiene comunión con Dios, una familia en la fe y un destino eterno espléndido. Su alma
estará sana y venga lo que venga, no tendrá el poder de quitarle la alegría de vivir.

Entonces acepta la ayuda de Dios para transformarte en las personas que anhelas ser, habla con Él, no le ocultes nada
Él te conoce. Y recuerden esto, ayer es ya paso, mañana aun no ha llegado, creamos en el Señor hoy,
vivamos hoy…
Señor Jesucristo, entiendo que te necesito. Gracias por amarme tanto que moriste en la cruz por mis pecados. Por
esto me arrepiento de todos ellos y te abro la puerta de mi corazón, te acepto como único, suficiente Señor y
Salvador. Escribe mi nombre en el libro de la vida y gracias por perdonar mis pecados, recibirme en tu iglesia y
darme la vida eterna”. Amén y Amén.

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