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EN TI ESTÁ MI CONFIANZA

Texto Salmo 37:5 Encomienda a Jehová tú camino, y confía en él; y él hará

Introducción:
Encomendar significa “CONFIAR TODO” al Señor, a nuestro Dios: la vida, la familia, el trabajo,
la salud, nuestra vida espiritual y nuestras posesiones, para que Él tome el CONTROL de todo
y la DIRECCIÓN de todo; pero encomendar al Señor también significa CREER, que Dios
cuidará de nosotros, mejor de lo que nosotros pudiéramos hacerlo.

Muchas personas se sienten tristes, porque no pueden decir que tienen un buen compañero,
una persona que este con ellos, que vaya con ellos, un compañero en quien confiar. No sé si
este sea su caso o no, pero a través del mensaje de hoy, se pretende mostrar el gran privilegio
que tiene todo aquel que ha sido redimido por la sangre de Cristo, un privilegio que trae
consigo grandes beneficios espirituales a tu vida, este privilegio es, que todo hijo de Dios
tiene a Jesucristo como compañero, en consecuencia debemos confiar en Él.

Jesús es nuestro compañero sin igual. La mejor compañía que puede existir en el mundo. No
estamos solo en las situaciones de este mundo, aunque así lo parezca, Nos hace compañía el
Rey de reyes y Señor de señores, Amén. Él nos dijo: ¨ y he aquí yo estoy con vosotros todos
los días hasta el fin del mundo. Sólo es tu determinación, tu decisión de confiar en él, ya que
de Jesús, al igual que del padre se puede decir que: "el no es hombre para que mienta, ni hijo
de hombre para que se arrepienta Num23:9. Jesús no fallará a su promesa de acompañarte, la
Biblia dice que las promesas de Dios son en Jesús sí… y en Jesús. Amén.

No espere hasta estar desesperado o en medio del dolor antes de decidir hacer lo más
importante. Confía en Dios. Proverbio 3:5-6 nos dice “Fíate de Jehová de todo tu corazón, y
no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus
veredas”. Ver versículos del 1-10; El contexto describe lo que Dios hará por la persona que
confía en ÉL y sigue sus principios en el diario vivir. Los versículos 5 y 6 prometen que si
vivimos en dependencia del Señor, Él se cerciorará de que mantengamos el rumbo y
recibamos su aprobación. En el Salmo 5:8 David oró “Guíame Jehová, en tu justicia, a causa
de mis enemigos, endereza delante de mí tu camino”. David sabía que Dios podía mostrarle lo
que debía hacer.

Hoy quiero hablarte de la confianza en Dios, la que tú debes tener sobre los asuntos de tu
propia vida, la que te librará de la paralizante resignación y te impulsará a lograr lo que  tal vez
ni te imagines.
Por eso hoy se le motiva, a estar dispuesto a esperar con paciencia, para que Él haga lo que es
mejor para nosotros y para lograrlo durante la espera es necesario:

1.- “Mejor es confiar en Dios, que confiar en el hombre” Salmo 118:8

Porque nuestro corazón, el corazón del ser humano es engañoso, miente, traiciona, te deja
esperando, te roba si tiene la oportunidad, porque algunos tienen malos hábitos, se niega, no te
responde la mayoría de las veces cuando lo necesitas, te deja solo, no se compadece de tu
mal.

Mientras que Dios:

 “…es nuestro amparo y fortaleza…” Salmo 46:1


 “Nos guardará y nos dará vida y nos defenderá de los enemigos” Salmo 41:2
 Te consolará cuando te hagan daño y te sanará cuando te enfermes. Salmo 42:3
 Defiende nuestra causa y está siempre atento para hacernos justicia. Salmo 35:23
 Nos libra de todas nuestra aflicciones. Salmo 34:19
 Es nuestra luz y nuestra salvación, la fortaleza para nuestra vida. Salmo 27:1
 Su bien y su misericordia nos seguirán todos los días. Salmo 23:6
 Nos devuelve lo que Satanás nos robó. Juan 10:10
 Nos llenará de su presencia y nos proveerá en todo y para todo. Salmo 23:5

Pero, ¿Qué significa confiar en Él?

Significa que no dependeremos de nuestro propio entendimiento. Un niño de dos años se da


cuenta de cuán sabios son sus padres. El niño puede que piense que sabe manejar las
hornillas de la cocina. Puede que se pregunte por qué mamá y papá no le permiten decidir por
sí mismo la hora en que debe irse a la cama. Pero los padres saben mejor que él lo que le
conviene. A medida que el niño crece, sería prudente de su parte pedir consejo a sus padres.

Cuando el rey David escribió: “Jehová es mi pastor” Salmo 23:1, es porque se había dado
cuenta del valor de confiar en Dios. Igual que una oveja cuya vida y seguridad dependen del
pastor, David vio que su vida estaba en las manos de Dios. David sabía que a medida que le
siguiera como lo hace una oveja, el Señor le conduciría como lo hace un pastor.

Un ejército numeroso se preparó para la batalla y los que tenían enfrente se llenaron de miedo,
corrieron a esconderse o huyeron a otras tierras. Y no es para menos porque además de ser
éstos últimos mucho menos en número, entre ellos no se encontraba arma alguna para pelear.

1Sa 13:5-7 TLA  Y así sucedió. Los filisteos se reunieron para atacar a los israelitas. Llegaron
treinta mil carros de guerra, seis mil soldados de caballería, y un ejército que ni siquiera se
podía contar. Todos ellos acamparon en Micmás, al este de Bet-avén.  (6)  Muchos israelitas
pensaron que no podrían vencer al ejército filisteo, así que fueron a esconderse en cuevas y
agujeros, entre las piedras y dentro de pozos secos,  (7)  y no faltaron algunos que cruzaron el
río Jordán y se fueron a la tierra de Gad y de Galaad. Saúl se quedó en Guilgal, pero todos en
su ejército estaban temblando de miedo....1Sa 13:19 TLA  Entre los israelitas no había quien
trabajara el hierro. Los filisteos no se lo permitían, por temor a que se hicieran espadas y
lanzas de ese metal. ... El día de la batalla los únicos que tenían una espada y una lanza eran
Saúl y Jonatán.

La situación era caótica y no ofrecía muchas esperanzas. Al igual que éstos, sé que muchos
enfrentan diariamente situaciones que no ofrecen esperanzas. Un esposo abusador y
golpeador, hijos rebeldes, un trabajo deshonroso, mal pago y esclavizante, enfermedades,
temores, ansiedad, soledad, angustia, y muchísimas cosas más que cada uno podría decir que
es su martirio diario.

Ante estas realidades la mayoría se rinde en una sumisa resignación pero otros no, y pelean, y
luchan, hasta que vencen su "imposible". Quiero decirte que eso puede pasar contigo si tú te
decides a confiar en Dios. Tal vez no veas una salida pero Dios es especialista en imposibles,
para Él todo es posible y ese "todo" incluye tu vida también.

La situación era desesperante para aquel pueblo pero hubo uno, y solo uno, que no se resignó,
que se propuso confiar en Dios, y en su confianza logró lo que parecía imposible. Ese hombre
fue el joven Jonatán.

1Sa 14:6 BL95  Jonatán dijo al joven que llevaba sus armas: "Vamos y atravesemos hasta el
puesto de esos incircuncisos. A lo mejor Yavé hace algo por nosotros, porque nada detiene a
Yavé. Ya sea con muchos o con pocos, él puede siempre salvar"....

Tres son las verdades que quisiera destacar de éste pasaje en cuanto a la confianza en Dios.
 En primer lugar confiar en Dios: ROMPE CON NUESTRAS LIMITACIONES.

El pueblo de Israel en su desesperación se encontraba escondido entre las rocas, otros habían
huido abandonando lo que les pertenecía por derecho, y los que estaban con el rey, llenos de
miedo, lo único que hacían era esperar.1Sa 14:2 NVI  Y es que Saúl estaba en las afueras de
Guibeá,  bajo un granado en Migrón,  y tenía con él unos seiscientos hombres.

 Las mismas actitudes asumimos cuando ante los desafíos cerramos nuestra mente con un
firme "yo no puedo"," eso nunca sucederá", "esto nunca cambiará", y un sin fin de frases que
expresan en su concepto lo mismo: resignación.

Este joven compartía las mismas limitaciones que aquellos  pero su confianza en Dios rompió
con todos los "no se puede", y se atrevió a soñar con un cambio basándose en el poder de
quien, él sabía, que era el Todopoderoso.

Quien pone en Dios su confianza podrá estar rodeado de muchas limitaciones pero en lo que
no estará limitado será en su capacidad de soñar con cosas mejores porque sabe que en
aquello que para él es imposible, posible es para Dios.

 La segunda verdad de la que quiero hablar es que la confianza en Dios NOS


PROYECTA A LA ACCIÓN.

 Mientras todos se encontraban paralizados, Jonatán entró en acción.

Quienes han caído en resignación frente a los obstáculos de su vida han quedados paralizados
en esa área y en la medida que esto se extienda como costumbre, tarde o temprano, aquél
será alguien que verá pasar los días de su vida sin esperar que nada le sorprenda, le llene, le
mueva.

Muchos son buenas personas pero que lo único fuera de lo común que les puede llegar a
suceder es la muerte porque después han quedado totalmente paralizados al perder la
motivación para proyectarse a la acción.

El hijo de Dios desconoce el poder que Dios ha puesto a su alcance cuando cae en este pozo
de resignación, en cambio la confianza en Dios nos moviliza y los sueños vuelven a florecer en
nuestra mente en la confianza de que para Aquél que sabemos que es el Todopoderoso aún
todas las cosas le son posibles. 

 La tercera verdad con la que quiero terminar es que la confianza en Dios NUNCA
NOS DEJARÁ AVERGONZADOS.

 Era una locura lo que subió al corazón de Jonatán pero rompió con sus limitaciones y entró en
acción, ¿cuál fue el resultado? Dios le dio la victoria que él se atrevió a soñar.1Sa 14:12-16
TLA  Enseguida le gritaron a Jonatán y a su ayudante: «¡Vengan acá, que les vamos a decir
algo!» Jonatán le dijo a su ayudante: «Vayamos, pues Dios nos ayudará a vencerlos».  (13) 
Así que subió ayudándose con pies y manos, y tras él subió su ayudante. A cada soldado
filisteo que encontraba, lo hería, y su ayudante lo mataba.  (14)  En ese ataque, y en un lugar
tan estrecho, Jonatán y su ayudante mataron a unos veinte hombres.  (15)  Además, Dios hizo
que temblara la tierra, y el ejército filisteo se asustó mucho.  (16)  Saúl había puesto en
Guibeá de Benjamín unos vigilantes, y cuando estos vieron que el ejército filisteo estaba
huyendo en completo desorden
2.- Mejor es confiar en Dios, por que nos da su salvación y vida eterna .

Isaías 12:2

¿Por qué hemos de confiar en Dios?

A menudo pensamos tontamente que somos lo suficientemente competentes como para tomar
sabias decisiones sin la ayuda de Dios. Razonamos.” Si Dios nos ha dado cerebro, ¿por qué es
tan importante confiar en él para tomar decisiones?” La respuesta es obvia a medida que
entendemos quién es Dios, porque Él nos conoce mejor de lo que nos concomemos nosotros
mismos. Él lo sabe todo acerca de todo, y comprende lo que nosotros nunca comprenderemos.
Dios tiene el control de todo lo que sucede. Es todopoderoso y hemos de rendirle cuentas de
nuestras acciones. Dios quiere ayudarnos y lo hará cuando le honremos debidamente. Él
proveerá todo lo que necesitamos ahora y en la vida venidera si le buscamos a Él primero.

El que se dispone a recibir la salvación de Dios por medio de su hijo Jesucristo y crecer
espiritualmente para recibir la vida eterna, entonces obtendrá la promesa, el PODER de Dios
por su Santo Espíritu Hechos 1:8

CONCLUSIÓN:

Dios nos presenta la oportunidad de cambiar nuestras vidas, y eso se logra depositando en ÉL
toda nuestra confianza, sin mirar las circunstancias que nos rodean, el desierto por el cual
estemos atravesando; sino puestos los ojos en Jesús el autor y consumador de nuestra fe, el
dador de vida, el Dios vivo y eterno. Pero, para ello, es necesario que usted le abra su corazón
a Dios.

Dios es real y puede serlo en tu vida cotidiana también. No te rindas entregando a la


resignación la vida abundante que Cristo ha venido a darte. Pon tu confianza en Dios, rompe
con tus limitaciones y empieza a actuar, porque debes saber que tal confianza nunca te dejará
avergonzado.

Hermanos, les quiero regalar un pensamiento que me pareció muy ajustado al tema del
día de hoy

“La vida, ciertamente, requiere perseverancia, por lo que los viajeros sabios seleccionan un
compañero de viaje que nunca se cansa ni titubea. Ese compañero, por supuesto, es Dios. ¿Te
encuentras cansado? Pide a Dios fortaleza. ¿Estás frustrado? Cree en sus promesas. ¿Estás
derrotado? Ora como si todo dependiera de Dios, y trabaja como si todo dependiera de ti. Con
la ayuda de Dios, puedes perseverar... y tú lo harás”. Charles H. Spurgeon

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