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WEN TZU
(SIGLO I A.C.)
Todos los seres humanos nacemos en este mundo equipados con LOS TRES TESOROS
preciosos de la vida. por virtud de los cuales somos capaces de existir, funcionar y
pensar. Estos tres tesoros componen nuestro legado natural inherente y el grado en el que
los protegemos y preservamos determina el estado de nuestra salud y la duración de
nuestra vida.
Los Tres Tesoros en los que la vida depende son: ESENCIA (jing), ENERGÍA (chi) y
ESPÍRITU (shen).
La ENERGÍA es la fuerza primordial de la vida que impregna cada célula y tejido del
cuerpo viviente y activa sus funciones vitales.
Juntos, Los Tres Tesoros (san bao), también conocidos como Las Tres Maravillas (san3
chi) funcionan como una sola unidad orgánica.
Cada uno de Los Tres Tesoros tiene dos aspectos fundamentales, conocidos en
terminología taoísta como pre-natales (hsien-tien) y post-natales (hou-tien) o
primordiales y temporales. Los aspectos pre-natales son las cualidades puras que
Uno de los propósitos primarios del Taoísmo es restaurar la unidad pre-natal y pureza
primordial de LA ESENCIA, LA ENERGÍA Y EL ESPÍRITU para prevenir la
enfermedad y degeneración del organismo humano post-natal, retardar el proceso de
envejecimiento y prolongar la vida, para que en los procesos de evolución que pueden
tomar mucho tiempo y paciencia, el tiempo no sea un factor estresante.
Las únicas características requeridas para ser un adepto Taoísta son VOLUNTAD Y
DISCIPLINA para tomar el mando completo de tu propia Energía, tomar control
completo de tu cuerpo y asumir responsabilidad completa de tu propia vida. El resto es
simplemente cuestión de método y tiempo.
ESENCIA
ENERGÍA
ESPÍRITU
PRÁCTICAS BÁSICAS