Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
PENDIENTE.
REBECA
¿Qué hora es?
DANILO
Casi las once.
REBECA
(Se ríe)
Ups… Parece que se me pegaron un poquito
las cobijas… ¿hace mucho te levantaste?
No sentí cuando te paraste de la cama.
DANILO
Hace un par de horas, amor. No podía
dormir. Estabas tan profunda que no
quise despertarte… Guardé tu desayuno en
el microondas, por si tienes hambre.
REBECA
Comeré en un momento. ¿Por qué no podías
dormir?
DANILO
Sólo un sueño extraño, nada importante.
REBECA
Si no fuera importante no te habría
impedido volver a dormir…
3.
DANILO
Te aseguro que no tiene importancia. Me
levanté porque me sentía bien para
escribir un poco, eso es todo…
DAMIAN
(Elocuente y seguro)
Lo que quiero que entiendan ya, es que,
por más principios esenciales
protectores del orden público del
ordenamiento jurídico que trate de
representar el proceso de litigio como
tal, en el fondo, tiene y protege
intereses netamente privados, las partes
en oposición, buscan mediante una
autoridad vinculante, demostrar cada una
que tiene la razón y el otro está
equivocado. Y, en virtud de la validez
que el juez le otorga a una u otra razón
subjetiva, la parte cuyo razón ha sido
invalidada, debe ahora una prestación
que se traduce en un derecho que le
puede exigir al otro. Si nos ponemos a
pensar, se trata de un carácter muy
egoísta, pero que, en la realidad, tiene
todo el sentido del mundo…
DAMIÁN
Muy bien. Tienes una idea clara,
trabajala mejor, lee algunos autores, y
reestructura tu argumento para la
próxima clase.
ESTUDIANTE
(Sonríe)
Gracias, profe.
DAMIÁN
¿Cómo estás? ¿cómo te sientes?
DANILO
Bien… Bastante bien… Todo muy tranquilo…
Incluso he vuelto a escribir…
DAMIÁN
(Sorprendido)
¿Ah sí?
DANILO
(Sonriente)
Sí…
DAMIÁN
¿Tienes tiempo para tomar un café?
DANILO
Aún me quedan unos 15 minutos antes de
la entrevista…
DAMIÁN
Muy bien… Vamos.
DAMIÁN
¡No tenía idea de la existencia de esas
fotos!
DANILO
Las encontré ayer cuando volví a casa,
mientras ordenaba viejos archivos en mi
computadora.
DAMIÁN
¿Cómo es que nunca me di cuenta cuando
las tomaste?
DANILO
No las tomé yo… Las tomó Rebeca… Ya
sabés cómo le encanta estar documentando
todo siempre. Incluso en aquella época
ya era así.
DANILO
Anoche volví a soñar con ella… Con
Rebeca…
PSICÓLOGO
¿Qué soñaste?
DANILO
Lo mismo de siempre… Lo que pasó esa
noche. Más que un sueño, es un recuerdo
recurrente.
PSICÓLOGO
Muchos de nuestros sueños no son más que
eso, fragmentos de nuestra memoria que
se mezclan con los penamientos que
guardamos en nuestro subconsciente. Al
haber pasado por un evento tan
traumatico, como lo fue la pérdida de tu
esposa, y que al día de hoy no hayan
atrapado al responsable, es apenas
normal que sueñes con eso. Lo
verdaderamente importante, y el motivo
de esta evaluación para poder determinar
si estás o no en condiciones de volver a
dar clases, es el hecho de que hayas
dejado de ver e interactuar con el
recuerdo de tu esposa… Ya que eso, en
primer lugar, fue lo que hizo que
pasaras internado los últimos seis
meses.
PSICÓLOGO
¡Danilo! ¿Escuchaste mi pregunta?
DANILO
(Reaccionando)
¡Disculpa! Me distraje un segundo,
¿podrías repetirla?
PSICÓLOGO
Necesito que seas absolutamente sincero
conmigo. ¿Sigues viendo, hablando,
interactuando con Rebeca?
10.
DANILO
(Traga saliva)
No. No, ya no. El tiempo en el hospital
me ayudó bastante a aceptar el hecho de
que Rebeca ya no está… De que lo que le
pasó no fue culpa mía, y que tarde o
temprano el responsable de su muerte va
a pagar por lo que hizo y, aunque no lo
haga, es algo que está por fuera de mi
control. No me queda otra que seguir con
mi vida, y eso es lo que intento hacer…
Incluso he vuelto a escribir; pero, para
eso, para que todo vuelva a la
normalidad, para poder avanzar,
realmente necesito volver a dar clases…
DAMIÁN se va.
12.
REBECCA
¿Pasa algo, cariño? Preparé toda esta
sorpresa para ti…
DANILO
Sí, pasa algo.
REBECA
Cuentame qué es. Seguro no es nada tan
grave como para no tener solución, o
como para no poder esperar a mañana.
REBECA
(Desentendida)
No entiendo… ¿De qué verdad hablas?
DANILO
(Con los ojos encharcados, resistiendo el llanto)
Aceptar… Aceptar que ya no estás aquí,
que llevas más de 7 meses muerta, y que
ya no puedo seguir pretendiendo que no
ha pasado nada…
REBECA
(Afligida)
Pero, si haces eso, voy a desaparecer…
DANILO
(Asiente)
Así es… Y creeme que no hay nada que no
daría por poder tenerte de nuevo junto a
mí; pero, por ahora, tengo que avanzar…
tengo que seguir adelante, y para eso
tengo que dejar de vivir en una mentira,
en una fantasía que me vendí a mi mismo
para no tener que asumir el dolor y la
culpa que siento por tu muerte… Que
siguen tan vivos en mi como el primer
día…
REBECA
(También al borde del llanto)
Te voy a extrañar mucho.
DANILO
Yo ya te extraño mucho… Y te sigo
amando, y lo seguiré haciendo… Eso no va
a cambiar, eso te lo prometo… Pero,
precisamente en nombre de ese amor que
te tengo, tengo que dejarte ir…
REBECA
¿No me regalas un último baile antes de
que me vaya?
9. ESCENAS EN PARALELO.
Se ve una sucesión de escenas en las que DANILO poco a poco
va acostumbrándose a su rutina, despertando sólo en cama,
dando sus clases, llegando a casa y encontrando todo solo,
llorando durante las noches, pero poco a poco haciendo el
duelo. De fondo, se ve y se escucha a DAMIÁN dando una clase
en donde reflexiona sobre el concepto de verdad.