Está en la página 1de 1324

11

ESTADO PLURINACIONAL
DE BOLIVIA

TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

ENERO - JUNIO
2012

TOMO I AÑO XII

GACETA Nº 1
Sucre-Bolivia
GACETA MAR – JUN 2012______________________________________________________DATOS INSTITUCIONALES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL DE


BOLIVIA
Publicación de Resoluciones pronunciadas por el Tribunal Constitucional
Plurinacional.

Secretaria General

DEPÓSITO LEGAL:
3-1-110-11 P.O.

EDICIÓN:
Nº 1-GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL DE BOLIVIA

DATOS INSTITUCIONALES:

SUCRE
Dirección: Avenida del Maestro Nº 300
Teléfonos: (591 4) 64- 40455
Fax: (591 4) 64- 21871
(591-4) 69- 12683
Email: tribunal@tc.gob.bo
Página web: www.tribunalconstitucional.gob.bo

LA PAZ
Dirección: Calle Potosí esq. Yanacocha (Interior del Tribunal
Departamental de Justicia)
Teléfono: (591-2) 2- 409420

IMPRESIÓN:
GACETA DIGITAL
PRESIDENTE
PRESENTACIÓN

La Constitución Política del Estado aprobada por primera vez en la historia mediante
referendo nacional y promulgada el 7 de febrero de 2009, dio lugar al nacimiento del
nuevo modelo de Estado Plurinacional.

La Constitución, producto de un pacto social y político, se constituye en la Norma Suprema


del Ordenamiento Jurídico del Estado Plurinacional, consagrando los derechos
fundamentales así como las garantías constitucionales en favor de las bolivianas y
bolivianos, bajo los parámetros de convivencia pacífica en el marco de la unidad del
Estado y en busca del vivir bien.

La novedosa Ingeniería Constitucional, observa la existencia autónoma e independiente del


Tribunal Constitucional Plurinacional, compuesto por magistradas y magistrados electos
por voto popular, entidad que por mandato de la Norma Suprema, tiene como misión, velar
por la supremacía de la Constitución, ejerciendo el control de constitucionalidad plural,
precautelando el respeto, la vigencia de los derechos y garantías constitucionales.

Una vez posesionados en sus cargos y conformadas las Salas que lo integran, estas
autoridades, tienen el mandato de resolver las causas de reciente ingreso y la obligación
de liquidar las causas pendientes a través de la Sala Liquidadora. El rol de estas
autoridades debe ajustarse al nuevo modelo constitucional, recuperando la credibilidad de
la Justicia Constitucional bajo los principios de pluralismo jurídico, interculturalidad y
transparencia.

Los resultados del trabajo encomendado al Tribunal Constitucional Plurinacional, se


reflejan a través de las Resoluciones emitidas por las diferentes salas, respondiendo a
valores supremos, principios y derechos fundamentales así como a garantías
constitucionales establecidos en la Norma Suprema en busca de una justicia oportuna,
eficaz, transparente, incluyente e independiente, que otorgue seguridad jurídica;
resoluciones que son de carácter vinculante y cumplimiento obligatorio, debiendo
publicarse en la Gaceta Constitucional Plurinacional, en forma digital e impresa.

La presente Gaceta Constitucional Plurinacional, es el reflejo del trabajo efectuado por el


Tribunal Constitucional Plurinacional en el primer semestre de labores, permitiendo a las
bolivianas y bolivianos, acceder a la publicidad e información de sus Resoluciones
Constitucionales y la clasificación de su jurisprudencia, de manera oportuna, fidedigna,
confiable y actualizada, en aplicación de los principios de independencia, imparcialidad,
seguridad jurídica, publicidad y gratuidad, reconocidos por la Constitución Política del
Estado.

En este sentido, el Tribunal Constitucional Plurinacional, ha encarado la elaboración,


publicación y socialización de la Gaceta Constitucional Plurinacional digital e impresa,
reflejando innovaciones de carácter didáctico, de fácil acceso para las y los usuarios en
general, sin necesidad de acudir al internet; constituyéndose en el generador y partícipe
del desarrollo y fortalecimiento de la Justicia Constitucional Plural.

Dr. Ruddy José Flores Monterrey


Presidente
Tribunal Constitucional Plurinacional
GACETA MAR – JUN 2012___________________GUÍA DE LA GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

GUÍA PARA EL USO DE LA


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I. RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I.1. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de Acciones de Defensa

a. Acción de Amparo Constitucional


b. Acción de Libertad
c. Acción de Cumplimiento
d. Acción Popular
e. Acción de Protección de Privacidad

I.2. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD NORMATIVO PREVIO Y POSTERIOR

I.2.1. CONTROL PREVIO

I.2.1.1. Declaraciones Constitucionales Pronunciadas en Diversas Consultas

1. Consultas de Proyectos de Ley


2. Consultas sobre Tratados Internacionales
3. Consultas de Proyectos de Estatutos Autonómicos
4. Consultas de Proyectos de Cartas Orgánicas
5. Consultas de Preguntas de Referendos
6. Consultas de Autoridades Indígena Originaria Campesinas sobre la
aplicación de sus normas jurídicas a un caso concreto
7. Consulta del Procedimiento de Reforma Parcial de la
Constitución Política del Estado

I.2.2. CONTROL POSTERIOR

I.2.2.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Acciones de


Inconstitucionalidad

i. Acción de Inconstitucionalidad Abstracta


ii. Acción de Inconstitucionalidad Concreta

I.2.2.2. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Otros Recursos

a. Recurso contra Tributos, Tasas, Patentes, Derechos o Contribuciones


Especiales
b. Recurso contra Resoluciones del Órgano Legislativo Plurinacional
GACETA MAR – JUN 2012___________________GUÍA DE LA GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I.3. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD COMPETENCIAL

I.3.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Acciones de Conflicto de


Competencias

1. Conflicto de Competencias entre Órganos del Poder Público.


2. Conflicto de Competencias entre el Nivel Central del Estado y las Entidades
Territoriales Autónomas y entre Éstas.
3. Conflicto de Competencias entre la Jurisdicción Indígena Originaria
Campesina, la Jurisdicción Ordinaria y la Jurisdicción Agroambiental.

I.3.2. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Recursos Directos de Nulidad

i. Recurso Directo de Nulidad.

I.4. AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I.4.1. Autos de Enmienda, Complementación y Ampliación

I.4.2. Autos de Calificación de Daños y Perjuicios

I.4.3. Otros Autos

II. RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA


LIQUIDADORA TRANSITORIA

II.1. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.1.2 Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de Acciones de


Defensa

a. Acción de Amparo Constitucional


b. Acción de Libertad
c. Acción de Cumplimiento
d. Acción Popular
e. Acción de Protección de Privacidad

II.2. AUTOS EMITIDOS POR LA SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA

II.2.1. Autos de Enmienda, Complementación y Ampliación

II.2.2. Autos de Calificación de Daños y Perjuicios

II.2.3. Otros Autos


GACETA MAR – JUN 2012_________________________________________________ABREVIATURAS Y SIGLAS

Abreviaturas y siglas
I. Textos legales

CC Código Civil (Decreto Ley 12760)


Ccom Código de Comercio (Decreto Ley 14379)
CE Código Electoral (abrogado) (Ley 1984)
CEB Código de Educación Boliviana
CEPA Código de Ética Profesional de la Abogacía (DS 26052)
CF Código de Familia (Decreto 10426 elevado por Ley 996)
CNNA Código del Niño, Niña y Adolescente (Ley 2026 )
CP Código Penal (Decreto Supremo 0667)
CPC Código de Procedimiento Civil (Decreto Ley 12760 )
CPCo Código Procesal Constitucional (Ley 254)
CPE Constitución Política del Estado (de 7 de febrero de 2009)
CPEabrg Constitución Política del Estado abrogada (Ley 2650)
CPIT Consulta a los Pueblos Indígenas del TIPNIS (Ley 222)
CPP Código de Procedimiento Penal (Ley 1970 )
CPT Código Procesal del Trabajo (Decreto Ley 16896)
CTB Código Tributario Boliviano (vigente) (Ley 2492)
CTb.1992 Código Tributario (abrogado) (de 1992) (Ley1340)
EFP Estatuto del Funcionario Público (Ley 2027)
L1008 Ley del Régimen de la Coca y Sustancias Controladas (Ley 1008)
Ley de Transición para el Tribunal Supremo de Justicia, Tribunal
L212 Agroambiental, Consejo de la Magistratura y Tribunal Constitucional
Plurinacional (Ley 212)
LA Ley de la Abogacía (Decreto Ley 16793)
LAC Ley de Arbitraje y Conciliación (Ley 1770)
LACG Ley de Administración y Control Gubernamentales (Ley 1178 )
LAPCAF Ley de Abreviación Procesal Civil y de Asistencia Familiar (Ley 1760)
Ley de Adecuación de Plazos para la Elección de los Vocales Electorales
LAPEVE Departamentales y la Conformación del Órgano Judicial y del Tribunal
Constitucional Plurinacional (Ley 040)
LCJ Ley del Consejo de la Judicatura (Ley 1817)
Led Ley de la Educación “Avelino Siñani - Elizardo Pérez” (Ley 070)
LEPS Ley de Ejecución Penal y Supervisión (Ley 2298)
LF Ley Forestal (Ley 1700)
LGA Ley General de Aduanas (1990)
LGPD Ley General para Personas con Discapacidad (Ley 223)
LGT Ley General del Trabajo (Decreto supremo de 24 de mayo de 1939)
LM Ley de Municipalidades (Ley 2028)
LMAD Ley Marco de Autonomías y Descentralización (Ley 031)
LOEP Ley del Órgano Electoral Plurinacional (Ley 018)
LOJ Ley del Órgano Judicial (Ley 025)
LOJ.1993 Ley de Organización Judicial (abrogada) (Ley 1455)
LOMPabrg Ley Orgánica del Ministerio Público (abrogada) (Ley 2175)
LOPN Ley Orgánica de la Policía Nacional (Ley de 8 de abril de 1985)
LPA Ley del Procedimiento Administrativo (Ley 2341)
LPD Ley de la Persona con Discapacidad (Ley 1678)
LRDPN Ley del Régimen Disciplinario de la Policía Boliviana (Ley 101)
GACETA MAR – JUN 2012_________________________________________________ABREVIATURAS Y SIGLAS

LRE Ley de Reforma Educativa (abrogada) (Ley 1565)


LRT Ley de Reforma Tributaria. Ley 843
LSIRESE Ley del Sistema de Regulación Sectorial (Ley 1600)
LSNRA Ley del Servicio Nacional de Reforma Agraria (Ley 1715)
Ley del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana para una vida Segura
LSNSC
(Ley 264)
LTC Ley del Tribunal Constitucional (abrogada) (Ley 1836)
LTCP Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (Ley 027)
Modifica el art. 8 de la Ley 222 de Consulta a los Pueblos Indígenas del
ML222
Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure – TIPNIS (Ley 240)

II. Otras disposiciones normativas

AC Auto Constitucional
AACC Autos Constitucionales
DL Decreto Ley
DS Decreto Supremo
DDSS Decretos Supremos
DUDH Declaración Universal de Derechos Humanos
GCP Gaceta Constitucional Plurinacional
NBSAP Normas Básicas del Sistema de Administración de Personal
NBSABS Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y Servicios
OM Ordenanza Municipal
OOMM Ordenanzas Municipales
PIDCP Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos
PIDESC Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales
RS Resolución Suprema
RRSS Resoluciones Supremas
RA Resolución Administrativa
RRAA Resoluciones Administrativas
RM Resolución Ministerial
RRMM Resoluciones Ministeriales
RDSPN Reglamento de Disciplina y Sanciones de la Policía Nacional
RGCS Reglamento General de la Cámara de Senadores
RM Resolución Ministerial
RPDPJ Reglamento de Procesos Disciplinarios del Poder Judicial
RR Resolución Rectoral
RRCSA Reglamento del Registro de Comercio y Sociedades por Acciones
RTA Resolución Técnica Administrativa
SC Sentencia Constitucional
SSCC Sentencias Constitucionales
TUE Tratado de la Unión Europea
UJC Unidad de Justicia Constitucional
SREF Superintendencia de Bancos y Entidades Financieras
RAR Resolución Administrativa Regulatoria

III. Instituciones que admiten siglas universalmente

CAN Comunidad Andina de Naciones


CIDH Corte Interamericana de Derechos Humanos
OEA Organización de Estados Americanos
OIT Organización Internacional del Trabajo
GACETA MAR – JUN 2012_________________________________________________ABREVIATURAS Y SIGLAS

ONU Organización de las Naciones Unidas

IV. Abreviaturas más usuales

aptdo. apartado
art. artículo
av. avenida
c. calle
Cap. capital
C.I. cédula de identidad
exp. orig. expediente original
fs. fojas
ha hectárea(s)
inc. inciso
m metro(s)
ob. cit. obra citada
pág. página
párr. párrafo
pp. páginas
s/n sin número
s/f sin fecha
ss. siguientes
Vda. Viuda
vta. vuelta
GACETA MAR – JUN 2012_______________________________CÓDIGOS DE ACCIONES, CONSULTAS Y
RECURSOS

CÓDIGOS DE ACCIONES, CONSULTAS Y RECURSOS

CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

CÓDIGO TIPO DE ACCIÓN


AAC Acción de Amparo Constitucional
AL Acción de Libertad
ACU Acción de Cumplimiento
APP Acción de Protección de Privacidad
AP Acción Popular

CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD NORMATIVO PREVIO Y POSTERIOR

CONTROL NORMATIVO PREVIO

CÓDIGO TIPO DE CONSULTA


CPL Consultas sobre la Constitucionalidad de Proyectos de Ley
CPR Consultas sobre la Constitucionalidad de Preguntas de Referendos
CTC Consultas sobre la Constitucionalidad de Tratados Internacionales
CEA Consultas sobre la Constitucionalidad de Proyectos de Estatutos Autonómicos
CCO Consultas sobre la Constitucionalidad de Cartas Orgánicas
CRC Consultas sobre la Constitucionalidad del Procedimiento de Reforma Parcial de
la Constitución
CAI Consulta de Autoridades Indígenas Originarias Campesinas sobre la Aplicación
de sus Normas Jurídicas a un Caso Concreto

CONTROL NORMATIVO POSTERIOR

CÓDIGO TIPO DE ACCIÓN O RECURSO


AIC Acción de Inconstitucionalidad Concreta
AIA Acción de Inconstitucionalidad Abstracta
RTG Recursos contra Tributos en General
RRL Recursos contra Resoluciones del Órgano Legislativo

CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD COMPETENCIAL

CÓDIGO TIPO DE ACCIÓN


CCJ Conflicto de Competencias Jurisdiccional
COP Conflicto de Competencias entre Órganos del Poder Público
CET Conflicto de Competencias entre el Nivel Central del Estado, las Entidades
Territoriales y entre Éstas.
RDN Recurso Directo de Nulidad

OTROS CÓDIGOS

RAC Revisión de Amparo Constitucional


RII Recurso Indirecto o Incidental de Inconstitucionalidad
RDI Recurso Directo o Abstracto de Inconstitucionalidad
RQ Recurso de Queja
GACETA MAR – JUN 2012_______________________________CÓDIGOS DE ACCIONES, CONSULTAS Y
RECURSOS
CÓDIGOS EMPLEADOS EN AUTOS CONSTITUCIONALES

ECA Enmienda, Complementación y Ampliación


CDP Calificación de Daños y Perjuicios
O Otros Autos
ECA-SL Enmienda, Complementación y Ampliación de la Sala Liquidadora
CDP-SL Calificación de Daños y Perjuicios de la Sala Liquidadora
O-SL Otros Autos de la Sala Liquidadora
SL Sala Liquidadora Transitoria
C/VD Con Voto Disidente
C/VC Con Voto Concurrente
C/VCD Con Voto Concurrente y Disidente
GACETA MAR – JUN 2012______________________________________CLASIFICACIÓN DE ÍNDICES

Clasificación de INDICES
1. General de Resoluciones Constitucionales.
2. Por Control de Constitucionalidad Plural.
3. Por Rama del Derecho.
4. Analítico Alfabético de Jurisprudencia.
5. Por Normas Declaradas Constitucionales e Inconstitucionales.
6. Por Resoluciones Constitucionales vinculadas con la Pueblos Indígenas Originario
Campesinos.
GACETA MAR – JUN 2012________________________________________________________________ÍNDICES

MARZO - JUNIO
2012
GACETA MAR – JUN 2012___________________ÍNDICE GENERAL DE RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES

ÍNDICE GENERAL DE
RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES
MARZO - JUNIO
2012
GACETA MAR – JUN 2012___________________ÍNDICE GENERAL DE RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES

SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA, PLENA Y LIQUIDADORA TRANSITORIA
DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL
Sentencia Pág. Sentencia Pág. Sentencia Pág.

0001/2012 0011 0049/2012 0308 0097/2012 0602


0002/2012 0019 0050/2012 0391 0098/2012 0890
0003/2012 0026 0051/2012 0396 0099/2012 0898
0004/2012 0032 0052/2012 0402 0100/2012 0912
0005/2012 0039 0053/2012 0737 0101/2012 0609
0006/2012 0047 0054/2012 0745 0102/2012 0614
0007/2002 0054 0055/2012 0410 0103/2012 0620
0008/2012 0059 0056/2012 0751 0104/2012 0629
0009/2012 0062 0057/2012 0758 0105/2012 0637
0010/2012 0069 0058/2012 0764 0106/2012 0647
0011/2012 0073 0059/2012 0418 0107/2012 0654
0012/2012 0079 0060/2012 0770 0108/2012 0662
0013/2012 0083 0061/2012 0426 0109/2012 0675
0014/2012 0088 0062/2012 0776 0110/2012 0680
0015/2012 0103 0063/2012 0431 0111/2012 0686
0016/2012 0110 0064/2012 0784 0112/2012 0692
0017/2012 0115 0065/2012 0790 0113/2012 0717
0018/2012 0122 0066/2012 0438 0114/2012 1721
0019/2012 0129 0067/2012 0795 0115/2012 0929
0020/2012 0134 0068/2012 0446 0116/2012 0936
0021/2012 0140 0069/2012 0805 0117/2012 0944
0022/2012 0146 0070/2012 0811 0118/2012 0949
0023/2012 0151 0071/2012 0456 0119/2012 0955
0024/2012 0158 0072/2012 0819 0120/2012 0960
0025/2012 0168 0073/2012 0826 0121/2012 0968
0026/2012 0173 0074/2012 0832 0122/2012 1727
0027/2012 0179 0075/2012 0462 0123/2012 0980
0028/2012 0187 0076/2012 0471 0124/2012 0987
0029/2012 0194 0077/2012 0484 0125/2012 1732
0030/2012 0200 0078/2012 0839 0126/2012 0994
0031/2012 0206 0079/2012 0494 0127/2012 0998
0032/2012 0213 0080/2012 0500 0128/2012 1004
0033/2012 0224 0081/2012 0849 0129/2012 1014
0034/2012 0229 0082/2012 0857 0130/2012 1026
0035/2012 0234 0083/2012 0865 0131/2012 1034
0036/2012 0243 0084/2012 0510 0132/2012 1041
0037/2012 0249 0085/2012 0516 0133/2012 1045
0038/2012 0260 0086/2012 0529 0134/2012 1054
0039/2012 0270 0087/2012 0537 0135/2012 1062
0040/2012 0277 0088/2012 0547 0136/2012 1070
0041/2012 0284 0089/2012 0554 0137/2012 1077
0042/2012 0299 0090/2012 0562 0138/2012 1089
0043/2012 0335 0091/2012 0873 0139/2012 1096
0044/2012 0340 0092/2012 0883 0140/2012 1103
0045/2012 0347 0093/2012 0569 0141/2012 1124
0046/2012 0353 0094/2012 0578 0142/2012 1135
0047/2012 0363 0095/2012 0588 0143/2012 1162
0048/2012 0371 0096/2012 0593 0144/2012 1175
GACETA MAR – JUN 2012___________________ÍNDICE GENERAL DE RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES

Sentencia Pág. Sentencia Pág. Sentencia Pág.

0145/2012 1186 0196/2012 1391 0247/2012 1607


0146/2012 1196 0197/2012 1396 0248/2012 1613
0147/2012 1201 0198/2012 1403 0249/2012 1619
0148/2012 1740 0199/2012 1412 0250/2012 1639
0149/2012 1750 0200/2012 1419 0251/2012 1643
0150/2012 1756 0201/2012 1424 0252/2012 1652
0151/2012 1763 0202/2012 1428 0253/2012 2063
0152/2012 1770 0203/2012 1919 0254/2012 1658
0153/2012 1777 0204/2012 1433 0255/2012 2069
0154/2012 1782 0205/2012 1439 0256/2012 2077
0155/2012 1210 0206/2012 1445 0257/2012 1667
0156/2012 1789 0207/2012 1453 0258/2012 1678
0157/2012 1794 0208/2012 1459 0259/2012 2082
0158/2012 1804 0209/2012 1467 0260/2012 1685
0159/2012 1811 0210/2012 1478 0261/2012 1692
0160/2012 1816 0211/2012 1486 0262/2012 1697
0161/2012 1822 0212/2012 1491 0263/2012 1702
0162/2012 1831 0213/2012 1924 0264/2012 2115
0163/2012 1841 0214/2012 1496 0265/2012 3251
0164/2012 1846 0215/2012 1931 0266/2012 2121
0165/2012 1852 0216/2012 1501 0267/2012 2090
0166/2012 1858 0217/2012 1938 0268/2012 2127
0167/2012 1865 0218/2012 1505 0269/2012 2135
0168/2012 1873 0219/2012 1945 0270/2012 2142
0169/2012 1219 0220/2012 1955 0271/2012 3273
0170/2012 1231 0221/2012 1961 0272/2012 2152
0171/2012 1881 0222/2012 1511 0273/2012 2161
0172/2012 1890 0223 /2012 1517 0274/2012 2166
0173/2012 1237 0224 /2012 1522 0275/2012 2172
0174/2012 1249 0225/2012 1967 0276/2012 2189
0175/2012 1256 0226/2012 1977 0277/2012 2200
0176/2012 1263 0227/2012 1535 0278/2012 2207
0177/2012 1280 0228/2012 1542 0279/2012 2218
0178/2012 1291 0229/2012 1983 0280/2012 2229
0179/2012 1299 0230/2012 1989 0281/2012 2238
0180/2012 1306 0231/2012 1548 0282/2012 2252
0181/2012 1899 0232/2012 1996 0283/2012 2258
0182/2012 1313 0233/2012 2003 0284/2012 2264
0183/2012 1321 0234/2012 2008 0285/2012 2270
0184/2012 1329 0235/2012 2016 0286/2012 2278
0185/2012 1334 0236/2012 2024 0287/2012 2294
0186/2012 1341 0237/2012 2029 0288/2012 2301
0187/2012 1348 0238/2012 2036 0289/2012 2308
0188/2012 1354 0239/2012 2043 0290/2012 2314
0189/2012 1906 0240/2012 2049 0291/2012 2327
0190/2012 1358 0241/2012 2056 0292/2012 2336
0191/2012 1364 0242/2012 1555 0293/2012 2343
0192/2012 1369 0243/2012 1567 0294/2012 2350
0193/2012 1375 0244/2012 1574 0295/2012 2357
0194/2012 1912 0245/2012 1587 0296/2012 2368
0195/2012 1384 0246/2012 1599 0297/2012 2375
GACETA MAR – JUN 2012___________________ÍNDICE GENERAL DE RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES

Sentencia Pág. Sentencia Pág. Sentencia Pág.

0298/2012 2383 0349/2012 2528 0400/2012 2878


0299/2012 2386 0350/2012 2533 0401/2012 2883
0300/2012 3139 0351/2012 2540 0402/2012 2894
0301/2012 2398 0352/2012 2546 0403/2012 2903
0302/2012 3280 0353/2012 2554 0404/2012 3539
0303/2012 3289 0354/2012 2564 0405/2012 2910
0304/2012 3298 0355/2012 2569 0406/2012 2922
0305/2012 3305 0356/2012 2575 0407/2012 3546
0306/2012 3314 0357/2012 2580 0408/2012 3554
0307/2012 3323 0358/2012 2587 0409/2012 3562
0308/2012 3229 0359/2012 2596 0410/2012 2933
0309/2012 3336 0360/2012 2604 0411/2012 2941
0310/2012 3342 0361/2012 2610 0412/2012 3571
0311/2012 3349 0362/2012 2620 0413/2012 2952
0312/2012 3357 0363/2012 2629 0414/2012 2961
0313/2012 3363 0364/2012 2641 0415/2012 2969
0314/2012 3370 0365/2012 2649 0416/2012 3580
0315/2012 3376 0366/2012 2661 0417/2012 3587
0316/2012 3385 0367/2012 2668 0418/2012 2980
0317/2012 2407 0368/2012 2682 0419/2012 2990
0318/2012 2415 0369/2012 2691 0420/2012 3592
0319/2012 3392 0370/2012 2701 0421/2012 2996
0320/2012 3398 0371/2012 2710 0422/2012 3598
0321/2012 2419 0372/2012 2720 0423/2012 3605
0322/2012 2424 0373/2012 2727 0424/2012 3007
0323/2012 2431 0374/2012 2734 0425/2012 3013
0324/2012 3405 0375/2012 2740 0426/2012 3613
0325/2012 3414 0376/2012 2747 0427/2012 3022
0326/2012 3421 0377/2012 2753 0428/2012 3031
0327/2012 3430 0378/2012 2760 0429/2012 3627
0328/2012 3436 0379/2012 2765 0430/2012 3636
0329/2012 3443 0380/2012 2770 0431/2012 3039
0330/2012 3450 0381/2012 2776 0432/2012 3048
0331/2012 3456 0382/2012 2783 0433/2012 3056
0332/2012 3462 0383/2012 2789 0434/2012 3642
0333/2012 3472 0384/2012 2796 0435/2012 3649
0334/2012 3483 0385/2012 2802 0436/2012 3656
0335/2012 3490 0386/2012 2808 0437/2012 3061
0336/2012 3221 0387/2012 2814 0438/2012 3662
0337/2012 3496 0388/2012 2824 0439/2012 3669
0338/2012 2440 0389/2012 2828 0440/2012 3068
0339/2012 2447 0390/2012 2836 0441/2012 3079
0340/2012 2464 0391/2012 2841 0442/2012 3086
0341/2012 2470 0392/2012 3514 0443/2012 3092
0342/2012 2479 0393/2012 3520 0444/2012 3102
0343/2012 2487 0394/2012 2852 0445/2012 3674
0344/2012 2493 0395/2012 2857 0446/2012 3681
0345/2012 2499 0396/2012 3527 0447/2012 3688
0346/2012 2508 0397/2012 3533 0448/2012 3695
0347/2012 3504 0398/2012 2866 0449/2012 3702
0348/2012 2514 0399/2012 2872 0450/2012 3112
GACETA MAR – JUN 2012___________________ÍNDICE POR CONSTROL DECONSTITUCIONALIDAD PLURAL

ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD


PLURAL
(MARZO)
RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA
ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en


Revisión de Acciones de Defensa

Sentencia Fecha Expediente Pág.

1 0001 /2012 13/03/2012 00051-AL …………………. 0011

2 0002 /2012 13/03/2012 00044-AL …………………. 0019

3 0003 /2012 13/03/2012 00028-AL …………………. 0026

4 0004 /2012 13/03/2012 00026-AL …………………. 0032

5 0005 /2012 16/03/2012 00027-AL …………………. 0039

6 0006 /2012 16/03/2012 00031-AL …………………. 0047

7 0007 /2012 16/03/2012 00054-AL …………………. 0054

8 0008 /2012 16/03/2012 00030-AL …………………. 0059

9 0009 /2012 16/03/2012 00007-AL …………………. 0062

10 0010 /2012 16/03/2012 00018-AAC …………………. 0069

11 0011 /201- 16/03/2012 00010-AL …………………. 0073

12 0012 /2012 16/03/2012 00036-AL …………………. 0079

13 0013 /2012 16/03/2012 00048-AL …………………. 0083

00049-AL
14 0014 /2012 16/03/2012 …………………. 0088
00061-AL
15 0015 /2012 16/03/2012 00046-AL …………………. 0103

16 0016 /2012 16/03/2012 00060-AL …………………. 0110

17 0017 /2012 16/03/2012 00034-AL …………………. 0115

18 0018 /2012 16/03/2012 00066-AL …………………. 0122

19 0019 /2012 16/03/2012 00047-AL …………………. 0129

20 0020 /2012 16/03/2012 00003-AL …………………. 0134

21 0021 /2012 16/03/2012 00006-AL …………………. 0140

22 0022 /2012 16/03/2012 00005-AL …………………. 0146

23 0023 /2012 16/03/2012 00009-AL …………………. 0151

16/03/2012 00052-AL
0024 /2012 …………………. 0158
24

16/03/2012 00069-AL
0025 /2012 …………………. 0168
25

16/03/2012 00056-AL
0026 /2012 …………………. 0173
26

16/03/2012
0027 /2012 00065-AL …………………. 0179
27

16/03/2012
0028 /2012 00021.AL …………………. 0187
28

16/03/2012
0029 /2012 00004-AL …………………. 0194
29

16/03/2012
0030 /2012 00035-AL …………………. 0200
30

31 0031 /2012 16/03/2012 00031-AL …………………. 0206


32 0032 /2012 16/03/2012 00059-AL …………………. 0213

33 0033 /2012 16/03/2012 00067-AL …………………. 0224

34 0034 /2012 16/03/2012 00011-AL …………………. 0229

35 0035 /2012 26/03/2012 00012-AAC …………………. 0234

36 0036 /2012 26/03/2012 00062-ACU …………………. 0243

37 0037 /2012 26/03/2012 00064-AL …………………. 0249

38 0038 /2012 26/03/2012 00013-AL …………………. 0260

39 0039 /2012 26/03/2012 00063-AAC …………………. 0270

40 0040 /2012 26/03/2012 00015-AAC …………………. 0277

41 0041 26/03/2012 00055-AL 0284


/2012 ………………….
C/VD 27/03/2012 00055-AL 0293

42 0042 26/03/2012 00038-AL 0299


/2012 ………………….
C/VD 27/03/2012 00038-AL 0306

43 0049 26/03/2012 00020-AL 0308


/2012 ………………….
C/VD 26/03/2012 00020-AL 0318

II. AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

II.1. Autos de Enmienda, Complementación y Ampliación


(ECA)

Auto Fecha Expediente Pág.

00049-AL
1 001 /2012-ECA 19/03/2012 …………………. 0327
00061-AL

2 002 /2012-ECA 30/03/2012 00018-AAC …………………. 0328


RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA
LIQUIDADORA TRANSITORIA

I. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de Acciones de


Defensa

Sentencia Fecha Expediente Pág.

1 0043 /2012 26/03/2012 19248-AL …………………. 0335

2 0044 /2012 26/03/2012 20692-AL …………………. 0340

3 0045 /2012 26/03/2012 20697-AL …………………. 0347

4 0046 /2012 26/03/2012 19444-AL …………………. 0353

5 0047 /2012 26/03/2012 20112-AL …………………. 0363

6 0048 /2012 26/03/2012 19710-AL …………………. 0371


GACETA MAR 2012_____________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO


(MARZO)
GACETA MAR 2012_____________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

I. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

C
Pág.

CONSTITUCIONAL .............................................................. 0001/2012 011


0002/2012 019
0003/2012 026
0004/2012 032
0006/2012 047
0007/2012 054
0008/2012 059
0009/2012 062
0010/2012 069
0011/2012 073
0012/2012 079
0013/2012 083
0014/2012 088
0015/2012 103
0016/2012 110
0017/2012 115
0018/2012 122
0019/2012 129
0020/2012 134
0021/2012 140
0022/2012 146
0023/2012 151
0024/2012 158
0025/2012 168
0026/2012 173
0027/2012 179
0028/2012 187
0029/2012 194
0030/2012 200
0031/2012 206
0032/2012 213
0033/2012 224
0034/2012 229
0035/2012 234
0036/2012 243
0037/2012 249
0038/2012 260
0039/2012 270
0040/2012 277
0041/2012 284
0042/2012 299
0049/2012 308
GACETA MAR 2012_____________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

Pág.

PENAL ............................................................................................ 0005/2012 039


0014/2012 088
0024/2012 158
0025/2012 168
0033/2012 224
0034/2012 229
0037/2012 249
0041/2012 284
0042/2012 299

II. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA LIQUIDADORA


TRANSITORIA

CONSTITUCIONAL ..................................................................... 0043/2012 335


0044/2012 340
0045/2012 347
0046/2012 353
0047/2012 363
0048/2012 371
GACETA MAR 2012_________________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE


JURISPRUDENCIA

(MARZO)
GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

I. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

A
Pág.

ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Naturaleza Jurídica ...........................................................................0002/2012 0019

ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL Y ACCIÓN


DE CUMPLIMIENTO

Diferenciaciones ...............................................................................0036/2012 0243

ACCIÓN DE CUMPLIMIENTO

Naturaleza jurídica y procedimiento aplicable en la tramitación…. ..0036/2012 0243

Retiro de la Acción de cumplimiento ante Tribunal .........................0035/2012 0234

ACCIÓN DE LIBERTAD

Activación ante procesamiento indebido: Subreglas .......................0007/2012 0054


0028/2012 0187
0029/2012 0194
0030/2012 0200
0031/2012 0206
0037/2012 0249
0038/2012 0260

Alcance y Finalidad ..........................................................................0034/2012 0229

Características: Informalismo, inmediatez y la competencia de


conocer el juez o tribunal en materia penal .......................................0023/2012 0151

Principio de Informalismo ................................................................ 0024/2012 0158

Procedimiento a seguir para la presentación oral de la acción de


libertad .............................................................................................. 0023/2012 - 0151
0024/2012 0158
0025/2012 0168

Traslativa o de pronto despacho .......................................................0017/2012 0115

APELACIÓN INCIDENTAL DE MEDIDAS CAUTELARES

Celeridad en la remisión de antecedentes al tribunal de alzada .........0025/2012 0168


GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.
APREHENSIÓN

Obligación de los fiscales de dejar constancia en acta u otro


documento del estado físico del imputado al momento de su
aprehensión........................................................................................ 0011/2012 …. 0073

CESACIÓN DE DETENCIÓN PREVENTIVA

Celeridad .......................................................................................... 0005/2012 0039


0013/2012 0083
0024/2012 0158

Procedencia: Autoridad jurisdiccional debe evaluar y contrastar la


prueba y valorarla íntegramente analizando riesgo de fuga u
obstaculización ……………………………………... ....................... 0041/2012 . .. 0284

Subreglas para determinar el acto dilatorio en la cesación de


detención preventiva (modulada a partir de la SC 0384/2011-R)... 0005/2012 .. . 0039
0022/2012 0146
0024/2012 0158

CESACIÓN DE DETENCIÓN PREVENTIVA


(Art. 239 - 1 CPP)

Exigencia de ponderación de dos elementos para su procedencia…. 0014/2012 0088

Exigencia de ponderación de nuevos elementos, segunda


instancia. ............................................................................................ 0014/2012 .. . 0088

COMPETENCIA EN ACCIÓN DE LIBERTAD

Jueces o tribunales en materia penal son los competentes para


conocer la acción de libertad: subreglas ........................................... 0032/2012 . ... 0213

DEBIDO PROCESO

Derecho a la defensa ......................................................................... 0002/2012 0019

DERECHO A EJERCER UNA FUNCIÓN PÚBLICA

Alcance ............................................................................................. 0035/2012 0234

DERECHO DE PETICIÓN

Vulneración también de otros derechos por la finalidad de la


petición ............................................................................................. 0036/2012 . 0243
GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

DESPIDO DE TRABAJADORA EMBARAZADA

Procedencia excepcional y extraordinaria de la acción de amparo


constitucional .....................................................................................0003/2012 0026

INCUMPLIMIENTO DE RESOLUCIONES
CONSTITUCIONALES

No puede resolverse a través de la interposición de otra acción


constitucional .....................................................................................0008/2012 0059

INMEDIATEZ EN LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Cómputo de seis meses a partir de ocurrido el acto ilegal u


omisión indebida o agotados los medios para hacer cesar el acto
ilegal……………. .............................................................................0040/2012 0277

JUEZ CAUTELAR (DE INSTRUCCIÓN)

Competencia para ejercer control jurisdiccional en etapa


preparatoria, velando por el cumplimiento de los derechos y
garantías constitucionales ..................................................................0004/2012 0032

Lesión a derechos fundamentales cometida por Fiscal o Policía


debe ser reclamada ante el Juez Cautelar ...........................................0016/2012 . 0110
0027/2012 . 0173

Subsidiariedad en acción de libertad exige que el juez cautelar


ejerza el control jurisdiccional de los actos investigativos y repare
posibles actos lesivos a los derechos y garantías. .............................. 0021/2012 . 0140

JURISDICCIÓN CONSTITUCIONAL

Corresponde a la justicia constitucional verificar si no se han


quebrantado los principios informadores del ordenamiento
jurídico .............................................................................................. 0031/2012 . 0206

Inadmisibilidad de activar dos jurisdicciones simultaneas ................0003/2012 0026

No revisa valoración de la prueba efectuada por juez ordinario,


administrativo o arbitral .....................................................................0026/2012 0173

No revisa valoración de la prueba excepto cuando se omita


arbitrariamente valorar la prueba y exista lesión a derechos
fundamentales y garantías constitucionales ......................................0019/2012 0129
GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.
No revisa valoración de prueba efectuada por la jurisdicción
ordinaria o autoridad competente, excepto si se desarrolla fuera del
marco legal y de la razonabilidad y equidad o conducta omisiva… .. 0012/2012 . 0079
0039/2012 0270

Requisitos que debe cumplir el o la accionante en su impugnación


para analizar interpretación de la jurisdicción ordinaria ................... 0039/2012 . 0270

JURISPRUDENCIA CONSTITUCIONAL EN EL TIEMPO

Aplicación de jurisprudencia constitucional anterior ........................ 0003/2012 0026

LEGITIMACIÓN PASIVA EN ACCIÓN DE LIBERTAD

Reglas y excepciones ........................................................................ 0018/2012 0122

LEGITIMACIÓN PASIVA EN LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Entendimiento ................................................................................... 0005/2012 0039


0017/2012 0115

MEDIDAS CAUTELARES

Cumplimiento obligatorio ................................................................. 0033/2012 0224

Debe ser la más favorable ................................................................. 0014/2012 0088

Exigencia de una Resolución motivada ............................................ 0014/2012 0088

La revocación de las medidas sustitutivas debe ser expresa,


motivada y fundamentada ................................................................. 0042/2012 0299

La revocación de las medidas sustitutivas debe observar los arts.


233 y 236 del CPP ............................................................................. 0042/2012 0299

Motivación y valoración integral de los medios probatorios ............ 0049/2012 0308

MEDIDAS SUSTITUTIVAS A LA DETENCIÓN

Requisitos para su revocatoria .......................................................... 0033/2012 0224

PRINCIPIO DE CELERIDAD PROCESAL

Entendimiento .................................................................................. 0015/2012 0103


GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.
Solicitud en la que se encuentre involucrado el derecho a la
Libertad física, debe tramitarse con la mayor celeridad posible o
dentro de los plazos razonables ........................................................0017/2012 0115
0022/2012 0146

PRINCIPIO DE DIRECCIÓN JUDICIAL DEL PROCESO

Entendimiento ...................................................................................0015/2012 0103

PRINCIPIOS ÉTICO-MORALES DE LA SOCIEDAD


PLURAL (AMA SUWA, AMA LLULLA, AMA KILLA)

Son normas con eficacia jurídica y carácter normativo, que


imponen a todos su observancia .......................................................0015/2012 . 0103

PROCESO PENAL

Excepciones e incidentes son recurribles de apelación .....................0001/2012 0011

PROSPECTIVA DE LA JURISPRUDENCIA O
PROSPECTIVE OVERRULING

El cambio de un precedente vinculante es aplicable a partir de la


publicación del nuevo razonamiento asumido ..................................0032/2012 0213

REQUISITOS DE ADMISIÓN EN ACCIONES DE


AMPARO CONSTITUCIONAL

Causa de pedir: contenido .................................................................0010/2012 0069

RESOLUCIONES JUDICIALES

Deben ser debidamente motivadas y fundamentadas ........................0006/2012 0047

SUBSIDIARIEDAD EXCEPCIONAL EN ACCIÓN DE


LIBERTAD

Casos excepcionales para no ingresar al análisis de fondo de la


Acción de Libertad: Subreglas .......................................................... 0003/2012 .. 0026
0004/2012 0032
0011/2012 0073
0016/2012 0110
0037/2012 0249

Circunstancias en las que por el daño inminente e irreparable no es


posible aplicar los supuestos anteriores, y corresponde ingresar al
análisis de fondo…………………………………………………... 0027/2012 0173
GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.
Exige el agotamiento de vías específicas, idóneas, eficientes y
oportunas para restituir el derecho a la libertad, la persecución o
procesamiento indebido .. ..................................................................0001/2012 … 0011
0004/2012 .. 0032
0009/2012 0062
0016/2012 0110
0020/2012 0134
0021/2012 0140
0029/2012 0194

II. AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

ENMIENDA, COMPLEMENTACIÓN Y AMPLIACIÓN

Facultad para corregir de oficio errores materiales ............................ 0001/2012-ECA 0326


0002/2012-ECA 0327

III. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA LIQUIDADORA


TRANSITORIA

ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Naturaleza jurídica ............................................................................ 0046/2012 0353

No define falta o perdida de competencia prevista por el art. 122


de la CPE, por existir para ello el recurso directo de nulidad .......... 0046/2012 . 0353
0047/2012 0363

Resguarda el derecho al debido proceso incluido el juez natural


pero solamente en sus elementos imparcialidad e independencia... ... 0048/2012 0371

AMPARO EXCEPCIONAL POR MEDIDAS DE HECHO

Alcances y fundamentos de la tutela excepcional ............................. 0044/2012 0340

Requisitos para su procedencia ......................................................... 0044/2012 0340

DERECHO A LA LIBERTAD FÍSICA

Petición que involucra este derecho debe atenderse con prioridad


y celeridad ........................................................................................ 0043/2012 0335
GACETA MAR 2012____________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

E
EFECTOS DE LA INTERPOSICIÓN DE ACCIONES
TUTELARES

No suspende actos posteriores de la jurisdicción ordinaria ...............0045/2012 0347

FIANZA ECONOMICA

Corresponde al imputado acreditar su estado de pobreza .................0043/2012 . 0335

SENTENCIAS CONSTITUCIONALES

Modulación de sus efectos ................................................................ 0046/2012 0353


GACETA ABR 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD


PLURAL
(ABRIL)
GACETA ABR 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de Acciones de


Defensa

Sentencia Fecha Expediente Pág.


1 0050 /2012 03/04/2012 00058-AAC …………………... 0391
2 0051 /2012 05/04/2012 00050-AAC …………………... 0396
3 0052 /2012 05/04/2012 00022-AAC …………………... 0402
4 0055 /2012 09/04/2012 00159-AL …………………... 0410
5 0059 /2012 09/04/2012 00141-AL …………………... 0418
6 0061 /2012 09/04/2012 00165-AL …………………... 0426
7 0063 /2012 09/04/2012 00043-AL …………………... 0431
8 0066 /2012 12/04/2012 00075-AL …………………... 0438
9 0068 /2012 12/04/2012 00014-AL …………………... 0446
10 0071 /2012 12/04/2012 00122-AL …………………... 0456
11 0075 /2012 12/04/2012 00041-AL …………………... 0462
12 0076 /2012 12/04/2012 00042-AAC …………………... 0471
13 0077 /2012 16/04/2012 00163-AL …………………... 0484
14 0079 /2012 16/04/2012 00162-AL …………………... 0494
15 0080 /2012 16/04/2012 00144-AAC …………………... 0500
16 0084 /2012 16/04/2012 00146-AAC …………………... 0510
17 0085 /2012 16/04/2012 00002-AAC …………………... 0516
18 0086 /2012 16/04/2012 00037-AAC …………………... 0529
19 0087 /2012 19/04/2012 00039-AL …………………... 0537
20 0088 /2012 19/04/2012 00121-AL …………………... 0547
21 0089 /2012 19/04/2012 00142-AL …………………... 0554
22 0090 /2012 19/04/2012 00085-AL …………………... 0562
23 0093 /2012 19/04/2012 00082-AL …………………... 0569
24 0094 /2012 19/04/2012 00102-AAC …………………... 0578
25 0095 /2012 19/04/2012 00219-AL …………………... 0588
26 0096 /2012 19/04/2012 00140-AAC …………………... 0593
27 0097 /2012 19/04/2012 00155-AAC …………………... 0602
28 0101 /2012 23/04/2012 00097-AL …………………... 0609
29 0102 /2012 23/04/2012 00076-AAC …………………... 0614
30 0103 /2012 23/04/2012 00078-AL …………………... 0620
GACETA ABR 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

Sentencia Fecha Expediente Pág.

31 0104 /2012 23/04/2012 00148-AAC …………………... 0629


32 0105 /2012 23/04/2012 00192-AAC …………………... 0637
33 0106 /2012 23/04/2012 00086-AL …………………... 0647
34 0107 /2012 23/04/2012 00210-AAC …………………... 0654
35 0108 /2012 27/04/2012 00073-AAC …………………... 0662
36 0109 /2012 27/04/2012 00074-AL …………………... 0675
37 0110 /2012 27/04/2012 00202-AL …………………... 0680
38 0111 /2012 27/04/2012 00139-AL …………………... 0686
39 0112 /2012 27/04/2012 00198-AL …………………... 0692
40 0113 /2012 27/04/2012 00123-AAC …………………... 0717

II. AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

II.1. Autos de Enmienda, Complementación y Ampliación


(ECA)
Auto Fecha Expediente Pág.
1 0003 /2012-ECA 16/04/2012 00060-AL …………………... 0729

RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA LIQUIDADORA


TRANSITORIA

I. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en


Revisión de Acciones de Defensa

Sentencia Fecha Expediente Pág.


1 0053 /2012 09/04/2012 20165-AAC …………………... 0737
2 0054 /2012 09/04/2012 20947-AL …………………... 0745
3 0056 /2012 09/04/2012 20647-AAC …………………... 0751
4 0057 /2012 09/04/2012 19841-AAC …………………... 0758
5 0058 /2012 09/04/2012 19570-AAC …………………... 0764
6 0060 /2012 09/04/2012 20362-AAC …………………... 0770
7 0062 /2012 09/04/2012 20480-AAC …………………... 0776
8 0064 /2012 09/04/2012 20401-AAC …………………... 0784
9 0065 /2012 12/04/2012 20291-AAC …………………... 0790
10 0067 /2012 12/04/2012 20048-AAC …………………... 0795
GACETA ABR 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

11 0069 /2012 12/04/2012 19822-AAC …………………... 0805

Sentencia Fecha Expediente Pág.

12 0070 /2012 12/04/2012 20598-AAC …………………... 0811


13 0072 /2012 12/04/2012 19461-AAC …………………... 0819
14 0073 /2012 12/04/2012 20630-AAC …………………... 0826
15 0074 /2012 12/04/2012 20673-AAC …………………... 0832
16 0078 /2012 16/04/2012 20566-AAC …………………... 0839
17 0081 /2012 16/04/2012 16024-AAC …………………... 0849
18 0082 /2012 16/04/2012 19565-AAC …………………... 0857
19 0083 /2012 16/04/2012 11912-AAC …………………... 0865
20 0091 /2012 19/04/2012 19531-AAC …………………... 0873
21 0092 /2012 19/04/2012 17799-AAC …………………... 0883
22 0098 /2012 19/04/2012 20701-AAC …………………... 0890
23 0099 /2012 23/04/2012 20558-AAC …………………... 0898
24 0100 /2012 23/04/2012 20482-ACU …………………... 0912
GACETA ABR 2012________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO


(ABRIL)
GACETA ABR 2012________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

I. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL
Pág.
A

ADMINISTRATIVO .......................................................................0080/2012 0500

CIVIL .............................................................................................. 0104/2012 0629

CONSTITUCIONAL .....................................................................0050/2012 0391


0051/2012 0396
0052/2012 0402
0055/2012 0410
0059/2012 0418
0061/2012 0426
0063/2012 0431
0066/2012 0438
0071/2012 0456
0075/2012 0462
0076/2012 0471
0077/2012 0484
0079/2012 0494
0080/2012 0500
0084/2012 0510
0085/2012 0516
0086/2012 0529
0087/2012 0537
0088/2012 0547
0089/2012 0554
0090/2012 0562
0093/2012 0569
0094/2012 0578
0095/2012 0588
0096/2012 0593
0097/2012 0602
0101/2012 0609
0102/2012 0614
0103/2012 0620
0104/2012 0629
0105/2012 0637
0106/2012 0647
0107/2012 0654
0108/2012 0662
0109/2012 0675
0111/2012 0686
0112/2012 0692
0113/2012 0717
GACETA ABR 2012________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

Pág.
F
FAMILIAR ..................................................................................... 0101/2012 0609
0102/2012 0614

LABORAL ...................................................................................... 0076/2012 0471

P
PENAL ............................................................................................ 0068/2012 0446
0089/2012 0554
0096/2012 0593
0097/2012 0602
0110/2012 0680

II. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA LIQUIDADORA


TRANSITORIA

C
Pág.

CONSTITUCIONAL ..................................................................... 0053/2012 0737


0054/2012 0745
0056/2012 0751
0057/2012 0758
0058/2012 0764
0060/2012 0770
0062/2012 0776
0064/2012 0784
0065/2012 0790
0067/2012 0795
0069/2012 0805
0070/2012 0811
0072/2012 0819
0073/2012 0826
0074/2012 0832
0078/2012 0839
0081/2012 0849
0082/2012 0857
0083/2012 0865
0091/2012 0873
0092/2012 0883
0098/2012 0890
0099/2012 0898
0100/2012 0912

DISCIPLINARIO ............................................................................. 0091/2012 0873


GACETA ABR 2012________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

Pág.
M

MUNICIPAL ...................................................................................0057/2012 0758

PENAL ............................................................................................. 0099/2012 0898

TRIBUTARIO ................................................................................0056/2012 0751


GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE


JURISPRUDENCIAL

(ABRIL)
GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

I. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

Pág.

ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Naturaleza Jurídica ...........................................................................0051/2012 0391

No es una instancia procesal ni casacional supletoria .......................0108/2012 0662

No se activa frente a hechos y derechos controvertidos ....................0063/2012 0431

ACCIÓN DE LIBERTAD

Activación ante procesamiento indebido: Subreglas ........................0075/2012 0462


0103/2012 0620
0106/2012 0647
0111/2012 0686

Alcance y Finalidad ..........................................................................0071/2012 0456

Características: Informalismo, inmediatez y la competencia de


conocer el juez o tribunal en materia penal .......................................0077/2012 0484

Naturaleza jurídica ............................................................................0077/2012 0484

Obligación del juez o tribunal de garantías de garantizar la


presencia del accionante en la audiencia pública .............................. 0059/2012 0418

Traslativa o de pronto despacho .......................................................0087/2012 0537


0112/2012 0692

ACTO ADMINISTRATIVO FIRME

Entendimiento ...................................................................................0080/2012 0500

AMPARO EXCEPCIONAL POR MEDIDAS DE HECHO

Alcances y fundamentos de la tutela excepcional ............................. 0113/2012 0717

Desalojo extrajudicial de inquilino de vivienda por propietario .......0113/2012 0717

Requisitos para su procedencia .........................................................0052/2012 0402


0113/2012 0717

APELACIÓN INCIDENTAL DE MEDIDAS CAUTELARES

Trámite (art. 251 del CPP) ................................................................ 0093/2012 0569


GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

APREMIO EN PROCESO LABORAL

Condiciones de validez previas a privación o restricción al


ejercicio del derecho a la libertad ..................................................... 0075/2012 0462

CESACIÓN DE DETENCIÓN PREVENTIVA

Celeridad en señalamiento de audiencia y en resolución;


existencia de plazo ............................................................................ 0110/2012 0680

Subreglas para determinar el acto dilatorio en la cesación de la


detención preventiva (modulada a partir de la SC 0384/2011-R) ...... 0111/2012 0686

CITACIÓN POR EDICTOS

Alcances ........................................................................................... 0089/2012 0554

COMPETENCIA EN ACCIÓN DE LIBERTAD

Jueces o tribunales en materia penal son competentes para


conocer la acción de libertad: subreglas ........................................... 0089/2012 0554

DAÑOS Y PERJUICIOS EN ACCIONES TUTELARES


PROCEDENTES

No analiza daño emergente y/o lucro cesante: Su conocimiento


corresponde a la vía civil ordinaria ................................................... 0113/2012 0717

DEBIDO PROCESO

Alcance y concepto ........................................................................... 0051/2012 0396

Derecho a la defensa ......................................................................... 0051/2012 0396

Derecho a ser juzgado sin dilaciones indebidas / celeridad


procesal ............................................................................................. 0111/2012 0686

Entendimiento .................................................................................. 0096/2012 0593

Triple dimensión en el ámbito normativo ......................................... 0051/2012 0396

DERECHO A LA EDUCACIÓN

Alcances ........................................................................................... 0080/2012 0500


GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

DERECHO A LA IGUALDAD

Concepto ........................................................................................... 0080/2012 0500

DERECHO A LA LIBERTAD

Condiciones de validez para su restricción .......................................0101/2012 0609

DERECHO A LA LIBERTAD FÍSICA

Petición que involucra este derecho debe atenderse con prioridad


y celeridad ........................................................................................0093/2012 0569

DERECHO A LA SALUD

Alcance ............................................................................................. 0052/2012 0402

DERECHO A LA VIDA

Base para ejercicio de los demás derechos .......................................0052/2012 0402

DERECHO AL AGUA

Alcance ............................................................................................. 0052/2012 0402

Las obligaciones del Estado y los particulares y los límites del


derecho al agua .................................................................................0084/2012 0510

DERECHO AL SUFRAGIO

Alcance ............................................................................................. 0085/2012 0516

DESISTIMIENTO Y/0 RETIRO DE ACCIÓN DE


LIBERTAD ANTE TRIBUNAL DE GARANTÍAS

Debe efectuarse antes del señalamiento de día y hora de audiencia


pública para su consideración ........................................................... 0103/2012 0620

DESPIDO DE TRABAJADORA EMBARAZADA

Procedencia excepcional y extraordinaria de la acción de amparo


constitucional ....................................................................................0102/2012 0614

DETENCIÓN PREVENTIVA EN APELACIÓN

Resolución debidamente fundamentada ...........................................0077/2012 0484


GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

EFICACIA HORIZONTAL DE LOS DERECHOS


FUNDAMENTALES EN EL ESTADO PLURINACIONAL
DE BOLIVIA

Entendimiento .................................................................................. 0085/2012 0516

ESTADO CONSTITUCIONAL DE DERECHO

La CPE es una norma jurídica de aplicación directa por las


autoridades jurisdiccionales en su labor de interpretación ................ 0112/2012 0692

Modelo asumido en Bolivia .............................................................. 0112/2012 0692

Normas constitucionales principios, normas constitucionales-


reglas y normas legales-reglas (entendimiento) ............................... 0112/2012 0692

Particularidad: Su carácter plurinacional e intercultural. .................. 0112/2012 0692

Principios ético-morales: ama suwa, ama qhilla, ama llulla, suma


qamaña y ñandereko ......................................................................... 0106/2012 0647

EXCUSAS Y RECUSACIONES EN PROCESO CIVIL

Marco Normativo ............................................................................. 0104/2012 0629

IMPROCEDENCIA DE LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Por interposición de otro recurso con identidad de objeto, sujeto


y causa .............................................................................................. 0109/2012 0675

INAMOVILIDAD FUNCIONARIA

De la mujer en estado de embarazo y/o de los progenitor, hasta


que el hijo (a) cumpla un año ........................................................... 0086/2012 0529

La sanción impuesta a la mujer embarazada trabajadora y/o al


progenitor debe postergarse hasta un año del nacimiento del hijo
(a) ..................................................................................................... 0086/2012 0529

JUEZ CAUTELAR (DE INSTRUCCIÓN)

Aplicación de suplencia legal ante recusación permite continuidad


en control jurisdiccional ................................................................... 0088/2012 0547
GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

Subsidiariedad en acción de libertad exige que el juez cautelar


ejerza el control jurisdiccional de los actos investigativos y repare
posibles actos lesivos a los derechos y garantías. ............................ 0088/2012 0547

JURISDICCIÓN CONSTITUCIONAL

Corresponde a la justicia constitucional verificar si no se han


quebrantado los principios informadores del ordenamiento
jurídico .............................................................................................. 0090/2012 0562

Obligación tanto del juez como del tribunal de garantías de enviar


al TCP toda la prueba aportada por las partes ...................................0087/2012 0537

LEGITIMACIÓN PASIVA EN ACCIÓN DE LIBERTAD

Excepciones en virtud al principio de informalismo y a la


finalidad que persigue esta acción tutelar .........................................0066/2012 0438
0106/2012 0647

Reglas y excepciones ........................................................................0055/2012 0410


0066/2012 0438

LEGITIMACIÓN PASIVA EN LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Alcance ............................................................................................. 0107/2012 0654

Cualquier trámite relacionado con las causas ingresadas hasta el


31 de diciembre de 2011, deben ser resueltas por los magistrados
suplentes ........................................................................................... 0107/2012 0654

Si la autoridad ya no ocupa el cargo, el agraviado debe accionar


contra la autoridad que ostenta el cargo desde el cual se realizó el
acto ilegal u omisión indebida .......................................................... 0107/2012 0654

MANDAMIENTO DE APREHENSIÓN

Alcance ............................................................................................. 0089/2012 0554

MEDIDAS CAUTELARES

Apelación prescinde de ciertas formalidades (Art. 251 del CPP) ....0096/2012 0593

Cesación de la detención preventiva .................................................0059/2012 0418


GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.
N

NORMAS CONSTITUCIONALES

Entendimiento .................................................................................. 0112/2012 0692

PERSECUCIÓN INDEBIDA

Alcance ............................................................................................. 0103/2012 0620

PRINCIPIO DE CELERIDAD PROCESAL

En la administración de justicia ........................................................ 0071/2012 0456

Solicitud en la que se encuentre involucrado el derecho a la


libertad física, debe tramitarse con la mayor celeridad posible o
dentro de los plazos razonables ........................................................ 0087/2012 0537

PRINCIPIO DE RAZONABILIDAD

Finalidad ........................................................................................... 0085/2012 0516

PRINCIPIO DE SEGURIDAD JURIDICA

Implica la protección constitucional a la actuación arbitraria estatal ... 0096/2012 0593

PRINCIPIO REFORMATIO IN PEIUS

Entendimiento y alcances ................................................................. 0077/2012 0484

PRINCIPIOS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL

Validez, jerarquía normativa y transversalidad de los principios


constitucionales ................................................................................ 0112/2012 0692

PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE LA CONSTITUCIÓN


POLÍTICA DEL ESTADO

Son mandatos jurídicos dirigidos al legislativo, ejecutivo y judicial...0112/2012 0692

PRINCIPIOS ÉTICO-MORALES DE LA SOCIEDAD


PLURAL (AMA SUWA, AMA LLULLA, AMA QHILLA)

Son normas con eficacia jurídica y carácter normativo, que


imponen a todos su observancia ....................................................... 0112/2012 0692

PROCESO DISCIPLINARIO EN LA POLICÍA

Debido Proceso en procesos administrativos disciplinarios ............. 0094/2012 0578


GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

Responsabilidad disciplinaria de los miembros de la Policía


Boliviana ........................................................................................... 0094/2012 0578

PROCESO PENAL

Declaratoria de rebeldía ....................................................................0089/2012 0554

Efectos jurídicos del sobreseimiento ................................................0068/2012 0446

PROSPECTIVA DE LA JURISPRUDENCIA O
PROSPECTIVE OVERRULING

El cambio de un precedente vinculante es aplicable a partir de la


publicación del nuevo razonamiento asumido ..................................0089/2012 0554

RECUSACIÓN EN PROCESO CIVIL

Causales de excusa o recusación no proceden cuando no están


dirigidas hacia las partes ...................................................................0104/2012 0629

REQUISITOS DE ADMISIÓN DE LA ACCIÓN DE


AMPARO CONSTITUCIONAL

Requisitos de forma y de contenido: identificación .......................... 0050/2012 0391

Señalamiento de domicilio de tercero interesado para efectos de


notificación: subreglas ......................................................................0050/2012 0391

RESOLUCIONES JUDICIALES

Deben ser debidamente motivadas y fundamentadas ........................0090/2012 0562

SUBSIDIARIEDAD DE LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Excepción por daño irreparable e irremediable ................................ 0084/2012 0510

Exigencia del agotamiento de recursos idóneos, oportunos y


eficaces ............................................................................................. 0052/2012 0402

SUBSIDIARIEDAD EXCEPCIONAL EN
ACCIÓN DE LIBERTAD

Aplicable en apelación contra resoluciones de jueces con asiento


judicial en provincias, sin desnaturalizar la acción de libertad .........0112/2012 0692
GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

Casos excepcionales para no ingresar al análisis de fondo de la


Acción de Libertad: Subreglas .......................................................... 0097/2012 0602

Exige el agotamiento de vías específicas, idóneas, eficientes y


oportunas para restituir el derecho a la libertad, la persecución o
procesamiento indebido .................................................................... 0055/2012 0410
0061/2012 0426
0079/2012 0494
0088/2012 0547
0095/2012 0588

TUTELA A TRABAJADORA EMBARAZADA

El derecho al trabajo y a una fuente laboral estable, prohibición


de discriminación, despido de la mujer por su estado civil y
embarazo .......................................................................................... 0105/2012 0637

Inamovilidad laboral ......................................................................... 0076/2012 0471

Inaplicabilidad de la medida preventiva de suspensión temporal


sin goce de haberes, al inicio del proceso administrativo ................. 0076/2012 0471

Reglas esenciales en el nuevo modelo constitucional ....................... 0102/2012 0614

II. AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

E
Pág.
ENMIENDA, COMPLEMENTACIÓN Y AMPLIACIÓN

Imposibilidad por claridad y precisión en resolución ........................ 0003/2012-ECA 0729

III. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LA SALA LIQUIDADORA


TRANSITORIA

A
Pág.
ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Alcance y finalidad ........................................................................... 0067/2012 0795

Naturaleza jurídica ............................................................................ 0057/2012 0758

No define falta o pérdida de competencia prevista por el art. 122


de la CPE, por existir para ello el recurso directo de nulidad ............ 0060/2012 0770
GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

0064/2012 0784
0065/2012 0790

Subreglas de improcedencia ............................................................. 0070/2012 0811


0098/2012 0890

ACCIÓN DE CUMPLIMIENTO

Ámbito de protección .......................................................................0100/2012 0912

ACCIÓN DE LIBERTAD

Activación ante procesamiento indebido: Subreglas ........................0054/2012 0745

ACTOS CONSENTIDOS EN ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Importa un acto positivo, concreto, libre e inequívoco, vinculado


de manera directa a la actuación ilegal impugnada ........................... 0083/2012 0865

AMPARO EXCEPCIONAL POR MEDIDAS DE HECHO

Alcances y fundamentos de la tutela excepcional ............................. 0069/2012 0805

Requisitos para su procedencia .........................................................0069/2012 0805

DEBIDO PROCESO

Alcance y concepto ...........................................................................0053/2012 0737


0058/2012 0764

Derecho a una resolución fundamentada y motivada .......................0092/2012 0883


0078/2012 0839

Derecho a una resolución motivada y congruente ............................ 0099/2012 0898

Elementos esenciales ........................................................................0053/2012 0737

DERECHO AL TRABAJO

Alcance ............................................................................................. 0058/2012 0764

INMEDIATEZ EN ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Cómputo de seis meses a partir de la comisión de la vulneración


alegada o de notificada la última decisión administrativa o
judicial .............................................................................................. 0056/2012 0751
GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

JURISDICCIÓN CONSTITUCIONAL

No revisa valoración de la prueba efectuada por juez ordinario,


administrativo o arbitral .................................................................... 0078/2012 0839

No revisa valoración de la prueba excepto cuando se omita


arbitrariamente valorar la prueba y exista lesión a derechos
fundamentales y garantías constitucionales ...................................... 0073/2012 0826

No revisa valoración de la prueba que corresponde a la


jurisdicción ordinaria ........................................................................ 0073/2012 0826
0091/2012 0873

No revisa valoración de prueba efectuada por la jurisdicción


ordinaria o autoridad competente, excepto si se desarrolla fuera
del marco legal, la razonabilidad, equidad o conducta omisiva ........ 0082/2012 0857
0099/2012 0898

Requisitos que debe cumplir el accionante en su impugnación


para analizar interpretación de la jurisdicción ordinaria ................... 0072/2012 0819
0073/2012 0826
0078/2012 0839
0099/2012 0898

LEGITIMACIÓN ACTIVA EN ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Interposición del recurso por el directamente agraviado (titular de


la acción) o por tercero con poder suficiente .................................... 0078/2012 0839

LEGITIMACIÓN PASIVA EN ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Agraviado debe accionar recurso contra la totalidad del tribunal


colegiado que asumió la decisión ..................................................... 0074/2012 0832

NOTIFICACIÓN DEFECTUOSA VÁLIDA

Cuando la finalidad del acto ha sido cumplida y no causa


indefensión aunque falten formalismos procesales ........................... 0099/2012 0898
GACETA ABR 2012______________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

Pág.

PRINCIPIO DE SEGURIDAD JURIDICA

Alcances ........................................................................................... 0053/2012 0737

Es un principio, y por lo tanto no puede ser tutelado por la acción


de amparo constitucional ..................................................................0058/2012 0764

PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO

Imposibilidad de plantear recurso jerárquico cuando no existen


otras autoridades superiores .............................................................. 0067/2012 0795

Sustanciación de recursos de revocatoria y jerárquico ......................0070/2012 0811

RECONSIDERACIÓN EN LA LEY DE
MUNICIPALIDADES (ART. 22 LM)

Medio de impugnación en vía administrativa (reconducción de


línea SC 512/2010-R) .......................................................................0062/2012 0776

RECURSO DIRECTO DE NULIDAD

Naturaleza jurídica ............................................................................0100/2012 0912

RECURSO INDIRECTO O INCIDENTAL DE


INCONSTITUCIONALIDAD

No suspende el proceso judicial o administrativo, ni impide que


se dicte la resolución o sentencia ......................................................0062/2012 0776

RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EN ACCIONES TUTELARES

No es posible cuestionar el procedimiento aplicado en el


desarrollo de una acción tutelar a través de otra ............................... 0098/2012 0890

SUBSIDIARIEDAD EN LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Subreglas de improcedencia ............................................................. 0081/2012 0849


0091/2012 0873
GACETA MAY 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD


PLURAL
(MAYO PRIMERA PARTE)
GACETA MAY 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

RESOLUCIONES STITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

I. CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1. Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de Acciones de Defensa

Sentencia Fecha Expediente Pág.

1 0115/2012 02/05/2012 00070-AL 0929


2 0116/2012 02/05/2012 00084-AL 0936
3 0117/2012 02/05/2012 00194-AL 0944
4 0118/2012 02/05/2012 00143-AL 0949
5 0119/2012 02/05/2012 00462-AL 0955
6 0120/2012 02/05/2012 00154-AAC 0960
7 0121/2012 02/05/2012 00092-AAC 0968
8 0123/2012 02/05/2012 00135-AAC 0980
9 0124/2012 02/05/2012 00359-AL 0987
10 0126/2012 02/05/2012 00161-AL 0994
11 0127/2012 02/05/2012 00126-AL 0998
12 0128/2012 02/05/2012 00057-AL 1004
13 0129/2012 02/05/2012 00137-AL 1014
14 0130/2012 02/05/2012 00089-AAC 1026
15 0131/2012 02/05/2012 00088-AAC 1034
16 0132/2012 04/05/2012 00433-AAC 1041
17 0133/2012 04/05/2012 00357-AL 1045
18 0134/2012 04/05/2012 00209-AAC 1054
19 0135/2012 04/05/2012 00199-AAC 1062
20 0136/2012 04/05/2012 00145-AAC 1070
21 0137/2012 04/05/2012 00363-AAC 1077
22 0138/2012 04/05/2012 00125-AAC 1089
23 0139/2012 04/05/2012 00218-AAC 1096
24 0140/2012 09/05/2012 00087-AAC 1103
CVD/2012 14/05/2012 1116
25 0141/2012 09/05/2012 00033-AL 1124
26 0142/2012 14/05/2012 00187-AAC 1135
CVD/2012 14/05/2012 1151
27 0143/2012 14/05/2012 00356-AAC 1162
GACETA MAY 2012_________________________ÍNDICE POR CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD PLURAL

28 0144/2012 14/05/2012 00091-AAC 1175


29 0145/2012 14/05/2012 00072-AAC 1186
30 0146/2012 14/05/2012 00081-AAC 1196
31 0147/2012 14/05/2012 00480-AL 1201
32 0155/2012 14/05/2012 00318-AL 1210
33 0169/2012 14/05/2012 00101-AAC 1219
GACETA MAY 2012_______________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

(MAYO PRIMERA PARTE)


GACETA MAY 2012_____________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

I. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA


ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL
Pág.

CONSTITUCIONAL .....................................................................0115/2012 0929


0116/2012 0936
0117/2012 0944
0118/2012 0949
0119/2012 0955
0120/2012 0960
0121/2012 0968
0123/2012 0980
0124/2012 0987
0126/2012 0994
0127/2012 0998
0128/2012 1004
0129/2012 1014
0130/2012 . 1026
0131/2012 1034
0132/2012 1041
0133/2012 1045
0134/2012 1055
0135/2012 1062
0136/2012 1070
0137/2012 1077
0138/2012 1089
0139/2012 1096
0140/2012 1103
0141/2012 1124
0142/2012 1135
0143/2012 1162
0144/2012 1175
0145/2012 1186
0146/2012 1196
0147/2012 1201
0155/2012 1210
0169/2012 1219

FAMILIAR .....................................................................................0129/2012 1014

MENOR ........................................................................................... 0118/2012 0947


GACETA MAY 2012_____________________________________________________ÍNDICE POR RAMA DEL DERECHO

Pág.

PENAL ............................................................................................ 0117/2012 0944


0128/2012 1004
GACETA MAY 2012_________________________________ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE JURISPRUDENCIA

ÍNDICE ANALÍTICO ALFABÉTICO DE


JURISPRUDENCIA
(MAYO PRIMERA PARTE)
I. SENTENCIAS CONSTITUCIONALES EMITIDAS POR LAS SALAS: PRIMERA
ESPECIALIZADA, SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

Pág.
A

ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Naturaleza Jurídica ...........................................................................0132/2012 1041

No se activa frente a hechos y derechos controvertidos ....................0145/2012 1186

ACCIÓN DE LIBERTAD

Activación ante procesamiento indebido: Subreglas ........................0124/2012 0987

Alcance y Finalidad ..........................................................................0129/2012 1014

Audiencia no puede suspenderse por ningún motivo ........................0155/2012 1210

Existencia de medio defensa eficaces e inmediatos en la ley


determina subsidiariedad excepcional ..............................................0147/2012 1201

Inaplicabilidad de las reglas de subsidiariedad en casos con


menores involucrados .......................................................................0118/2012 0949
0128/2012 1004

Presentación de prueba en esta acción ..............................................0117/2012 0944

Traslativa o de pronto despacho .......................................................0116/2012 0936

ACCIÓN PENAL PÚBLICA

El inicio de la investigación realizada a denuncia de quienes se


encuentran comprendidos en el Art. 35 del CPP no podrá impedir
inicio y la prosecución de la Acción Penal Pública .......................... 0141/2012 1124

ACCIÓN PENAL PÚBLICA, ACCIÓN PENAL PRIVADA Y


ACCIÓN PENAL PRIVADA A INSTANCIA

Prohibiciones y limitaciones en el ejercicio de la acción penal


(art. 35 del CPP) ...............................................................................0141/2012 1124

ACTOS CONSENTIDOS EN LA ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL

Importa un acto positivo, concreto, libre e inequívoco, vinculado


de manera directa a la actuación ilegal impugnada… ........................0137/2012 1077

APELACIÓN INCIDENTAL DE MEDIDAS CAUTELARES

[Escriba texto]
Análisis circunscrito a los aspectos cuestionados de la resolución
recurrida ............................................................................................ 0141/2012 1124
Pág.

APREHENSIÓN DE ADOLESCENTE INFRACTOR

El Código Niño, Niña, Adolescente dispone únicamente la


aprehensión y no el arresto ............................................................... 0128/2012 1004

Únicamente debe ser dispuesta por el juez de la niñez y


adolescencia ...................................................................................... 0128/2012 1004

CESACIÓN DE DETENCIÓN PREVENTIVA

Celeridad en señalamiento de audiencia y en resolución.


Existencia de plazo ............................................................................ 0117/2012 0944
0133/2012 1045

Regida por el principio de celeridad procesal ................................... 0133/2012 1045

CITACIÓN CON LA DEMANDA Y AUTO DE ADMISION


EN ACCIONES TUTELARES

Nulidad de actuados por falta de citación a demandados ................. 0127/2012 0998

COMPETENCIA EN ACCIÓN DE LIBERTAD

Cuando la acción de libertad se lleve adelante sábado, domingo o


feriados, asumirá competencia el Juez de Instrucción Penal de
turno. ................................................................................................ 0115/2012 0929

Jueces o tribunales en materia penal son los competentes para


conocer la acción de libertad: subreglas ........................................... 0118/2012 0949

COSA JUZGADA

Efectos .............................................................................................. 0144/2012 1175

Revisión excepcional por vulneración de derechos y garantías


constitucionales ................................................................................ 0144/2012 1175

DEBIDO PROCESO

Alcance y concepto ........................................................................... 0143/2012 1162

Aplicación en toda actividad sancionadora sea en ámbito judicial


o administrativo ................................................................................ 0140/2012 1103

[Escriba texto]
0142/2012 1135
0169/2012 1219

Pág.

Derecho a la defensa como un componente o elemento al debido


proceso y a su vez el principio de publicidad inmerso en el
derecho a la defensa ...........................................................................0131/2012 1034

Derecho a la doble instancia ............................................................. 0143/2012 1162

Entendimiento ...................................................................................0169/2012 1219

Su configuración constitucional y en los instrumentos


internacionales ..................................................................................0139/2012 1096

DERECHO A LA DEFENSA

Dos dimensiones: defensa material y técnica ...................................0155/2012 1210

DERECHO A LA PROPIEDAD

Elementos esenciales ........................................................................0121/2012 0968

La justiciabilidad de este derecho a la luz del principio de


razonabilidad ....................................................................................0121/2012 0968

DERECHO AL TRABAJO

Definición .........................................................................................0169/2012 1219

DERECHO DE PETICIÓN

Oponible frente a particulares. Supuestos .........................................0136/2012 1070

Subreglas .......................................................................................... 0143/2012 1162


0136/2012 1070

DERECHOS DEL NIÑO

Sus derechos a los instrumentos internacionales y el CNNA ...........0129/2012 1014

ESTADO CONSTITUCIONAL DE DERECHO

La CPE es una norma jurídica de aplicación directa por las


autoridades jurisdiccionales en su labor de interpretación ................0121/2012 0968
0140/2012 1103

[Escriba texto]
INTERPRETACIÓN DE LEGALIDAD ORDINARIA

Corresponde a la justicia constitucional verificar si no se han


quebrantado los principios informadores del ordenamiento jurídico… .. 0135/2012 1062
Pág.

JURISDICCIÓN CONSTITUCIONAL

No revisa valoración de la prueba efectuada por juez ordinario,


administrativo o arbitral .................................................................... 0130/2012 1026

LEGITIMACIÓN PASIVA EN LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Agraviado debe accionar recurso contra la autoridad que ejecutó


el acto ilegal y la que podía corregirlo .............................................. 0123/2012 0980

Coincidencia entre autoridad que presuntamente causó


vulneración y aquella contra quien se dirige la acción ..................... 0134/2012 1054

Entendimiento .................................................................................. 0134/2012 1054

Si la autoridad ya no ocupa el cargo, el agraviado debe accionar


contra la autoridad que ostenta el cargo desde el cual se realizó el
acto ilegal u omisión indebida .......................................................... 0134/2012 1054

MINISTERIO PÚBLICO

Principio de obligatoriedad, unidad e indivisibilidad ....................... 0133/2012 1045

PERSECUCIÓN ILEGAL

Presupuestos ..................................................................................... 0124/2012 0987

PRINCIPIO DEL SUMAJ QAMAÑA

Entendimiento .................................................................................. 0129/2012 1014

PRINCIPIO PRO ACTIONE

Alcances ........................................................................................... 0139/2012 1096

PRINCIPIOS DEL DERECHO CONSTITUCIONAL

[Escriba texto]
Validez, jerarquía normativa y transversalidad de los principios
constitucionales ................................................................................0133/2012 1045

Pág.

PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO

Sus dos instancias (revocatoria y jerárquico) no están dirigidas a


cumplir una formalidad procesal en sí misma, mas bien tienen el
valor de asegurar el derecho a la doble instancia. ............................. 0140/2012 1103
0142/2012 1135

PROCESO PENAL

Corrección de actividad procesal defectuosa por la vía incidental ....0141/2012 1124

REQUISITOS DE ADMISIÓN EN LA ACCIÓN DE


AMPARO CONSTITUCIONAL

Causa de pedir: Excepción al conceder tutela ultra petita al


advertir error a tiempo de formular petitorio ....................................0136/2012 1070

Citación de tercero interesado como requisito formal, es de


carácter inexcusable ..........................................................................0137/2012 1077

Requisitos de forma y de contenido: identificación .......................... 0134/2012 1054

Señalamiento de domicilio de tercero interesado para efectos de


notificación: subreglas ......................................................................0137/2012 1077

RESOLUCIÓN DEL TRIBUNAL O JUEZ DE GARANTÍAS

Debe ser remitido al TCP en el plazo de 24 hrs. ............................... 0155/2012 1210

SUBSIDIARIEDAD DE LA ACCIÓN DE AMPARO


CONSTITUCIONAL

Agotamiento de instancias establecidas por Ley .............................. 0145/2012 1186

Subreglas de improcedencia ............................................................. 0120/2012 0960


0128/2012 1004
0138/2012 1089
0145/2012 1186
0146/2012 1196

[Escriba texto]
SUBSIDIARIEDAD EXCEPCIONAL EN ACCIÓN DE
LIBERTAD

Casos excepcionales para no ingresar al análisis de fondo de la


Acción de Libertad: Subreglas ......................................................... 0115/2012 0929
0119/2012 0955
0147/2012 1201
Pág.

Exige el agotamiento de vías específicas, idóneas, eficientes y


oportunas para restituir el derecho a la libertad, la persecución o
procesamiento indebido .................................................................... 0119/2012 0955
0126/2012 0994

TRIBUNAL DE ALZADA

Resoluciones ultra petita ................................................................... 0141/2012 1124

[Escriba texto]
[Escriba texto]
[Escriba texto]
MARZO

[Escriba texto]
[Escriba texto]
RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS
POR LAS SALAS: PRIMERA ESPECIALIZADA,
SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

[Escriba texto]
[Escriba texto]
CONTROL DE
CONSTITUCIONALIDAD
TUTELAR

[Escriba texto]
[Escriba texto]
Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de
Acciones de Defensa

[Escriba texto]
[Escriba texto]
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0001/2012


Sucre, 13 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00051-2012-01-AL
Departamento: Oruro

En revisión la Resolución 01/2012 de 31 de enero, pronunciada dentro de la acción de libertad


interpuesta por Wilson Tito López y Edmundo Tito Copa contra Máximo Rosendo Gutiérrez
Rojas, Juez Tercero de Instrucción en lo Penal y cautelar del Tribunal Departamental de
Justicia de Oruro.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 30 de enero de 2012, cursante de fs. 6 a 8, los accionantes, señalan
que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Mediante Auto Interlocutorio 701/2011 de 22 de septiembre, el Juez Tercero de Instrucción en


lo Penal, anuló la Resolución de 30 de enero de 2011, por la que se les imputó formalmente así
como también el requerimiento de aplicación de medidas cautelares de carácter personal de la
misma fecha, sin que el Ministerio Público hubiera presentado una nueva imputación; en ese
sentido, por escrito de 26 de enero de 2012, solicitaron su inmediata libertad al Juez de la causa,
sin que dicha autoridad, se hubiera pronunciado al respecto hasta la fecha de presentación de
esta acción.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Los accionantes, alegan la vulneración de su derecho a la libertad, citando al efecto el art. 23.I
de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se declare “procedente” la presente acción y por ende se ordene su inmediata libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 31 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
191 a 192 vta., se produjeron los siguientes hechos.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 11


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de los accionantes, manifestó su sorpresa al encontrar actuados nuevos en el


cuaderno procesal, refiriéndose a un Auto complementario emitido por el Juez demandado y una
nueva imputación formal, motivo por el cual solicitó certificación del sistema IANUS, aclarando
que sus representados fueron notificados con ambos actuados el 30 de enero de 2012,
habiéndose encontrado consecuentemente, ilegalmente detenidos por más de cuatro meses,
desde el 22 de septiembre de 2011.

Con el uso del derecho a la réplica, el abogado de los accionantes, señaló que, si bien se subsanó
respecto a la anulación de medidas cautelares y la imputación formal, mediante Auto de 25 de
enero de 2012, los cuatro meses que transcurrieron en ese interín, sus clientes permanecieron
privados de su libertad, sin que exista imputación toda vez que la misma había sido anulada.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Máximo Rosendo Gutiérrez Rojas, Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, en audiencia


informó que a solicitud del Ministerio Público, se impuso a los accion antes medidas
cautelares de carácter personal en observancia a los arts. 233, 234 y 235 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), disponiendo la detención preventiva de los mismos en el penal
de “San Pedro”, quienes en ejercicio de su derecho a la defensa, interpusieron incidente de
actividad procesal defectuosa en mérito al art. 169 inc. 3) del CPP, el cual fue declarado
procedente por Resolución de 22 de septiembre de 2011, pero únicamente respecto a Isaac
Pablo Yampara Yampara y no en relación a los ahora accionantes, situación que, si bien no
fue especificada en dicho fallo, fue aclarada mediante Auto de 25 de enero de 2012; por
otra parte, en la misma fecha, el Ministerio Público presentó nueva imputación formal
contra Isaac Pablo Yampara Yampara, habiéndose señalado fecha de audiencia de
consideración de medidas cautelares. Si bien los accionantes, solicitaron su inmediata
libertad, al haberse enmendado el error conforme a lo dispuesto por los arts. 125 y 168 del
CPP, se dispuso estarse al Auto de 25 de enero del referido año, por lo que, el órgano
jurisdiccional ha enmarcado su actividad a ley sin vulnerar ningún derecho o garantía
constitucional respecto a la restricción a la libertad alegado por los accionantes; finalmente,
manifiesta que éstos debieron acudir ante la instancia jurisdiccional antes de activar la
acción de libertad, motivo por el cual, en mérito al principio de subsidiariedad contenido en
la “Sentencia Constitucional 1214 del año 2011”, solicita desestimar y denegar la presente
acción tutelar.

I.2.3. Resolución

El Juez Segundo de Sentencia del Tribunal Departamental de Oruro, pronunció la


Resolución 01/2012 de 31 de enero, cursante de fs. 193 a 197 vta., por la cual denegó la
acción de libertad, bajo los siguientes argumentos: 1) Los accionantes se encuentran
detenidos y privados de su libertad en base a un mandamiento expedido por autoridad
competente y cumpliendo las medidas cautelares impuestas; 2) Se alega procesamiento
indebido; sin embargo, para que sea procedente debe existir ind efensión y en el presente
caso, los accionantes han hecho uso de su derecho a la defensa en todo momento; y, 3) Con
carácter previo a activar la presente acción de libertad, los demandantes, debieron recurrir
ante la autoridad jurisdiccional e incoar recurso de reposición contra el decreto de 27 de
enero de 2012; y en última instancia, luego de hacerlo, recién acudir a la jurisdicción
constitucional mediante la acción de amparo constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 12


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional

En virtud a las atribuciones conferidas a los Magistrados del Tribunal Constitucional


Plurinacional por mandato de la Ley 027 de 6 de julio de 2010, se procedió al sorteo de causas;
habiéndose, en el presente caso, efectuado tal actuado procesal el 15 de febrero de esta gestión,
por lo que la presente Resolución se pronuncia dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Por Resolución de 30 de enero de 2011, el Fiscal de Materia de Sustancias Controladas,


Rubén Arciénega Llano, presentó imputación formal contra Isaac Pablo Yampara Yampara,
Edmundo Tito Copa y Wilson Tito López, por la supuesta comisión del delito de fabricación de
sustancias controladas, previsto y sancionado por el art. 47 de la Ley del Régimen de la Coca y
Sustancias Controladas (L1008), por memorial de la misma fecha el Ministerio Público requirió
la aplicación de medidas cautelares de detención preventiva en aplicación de los arts. 233, 234 y
235 del CPP (fs. 27 a 36).

II.2. En audiencia de consideración de medidas cautelares, llevada a cabo el 31 de enero de


2011, el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, en suplencia legal, dando cumplimiento a lo
dispuesto por los arts. 233, 234 y 235 del CPP, mediante Auto Interlocutorio de la misma fecha,
dispuso la detención preventiva de los imputados en el penal de “San Pedro”, así como la
notificación a las partes con dicha Resolución a efectos del recurso de apelación previsto por el
art. 251 del mismo cuerpo normativo (fs. 40 a 43 vta.).

II.3. Isaac Pablo Yampara Yampara, por memorial presentado el 22 de agosto de 2011, cursante
de fs. 148 a 150 vta., interpuso incidente de nulidad por defecto absoluto, el cual fue corrido en
traslado por providencia de la misma fecha (fs. 151) y contestada por escrito de 27 de igual mes
y año (fs. 157), habiéndose el coimputado, Wilson Tito López, adherido al incidente interpuesto
por memorial presentado el 30 del indicado mes y año (fs. 159 a 160 vta.).

II.4. Por Auto Interlocutorio de 22 de septiembre de 2011, el Juez Tercero de Instrucción en lo


Penal del Tribunal Departamental de Oruro, declaró “CON LUGAR el incidente de nulidad por
defecto absoluto formulado por ISAAC PABLO YAMPARA YAMPARA opuesto de fs. 136 a
138 del cuaderno de control jurisdiccional, en su mérito ANULA la resolución de imputación
formal de 30 de enero de 2011, corriente a folios 15 in fine de obrados, el requerimiento de
aplicación de medidas cautelares de carácter personal…” (sic) (fs. 165 a 166 vta.), habiéndose
dispuesto por Auto de 23 de septiembre de igual año, se libre mandamiento de libertad a favor
de Isaac Pablo Yampara Yampara (fs. 169 a 172).

II.5. Mediante Auto de 25 de enero de 2012, el Juez de la causa, complementó la Resolución de


22 de septiembre de 2011, aclarando que la nulidad de la imputación formal y aplicación de
medidas cautelares, solamente se refería en cuanto al imputado Isaac Pablo Yampara Yampara,
manteniéndose para los otros coimputados (fs. 178).

II.6. Por memoriales presentados el 25 de enero de 2012, el Fiscal de Materia, Teddy Ramiro
Yapari Mendoza, presentó imputación formal y solicitó medidas cautelares contra Isaac Pablo
Yampara Yampara, por la comisión del delito de fabricación de sustancias controladas (fs. 181 a
185 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 13


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.7. Wilson Tito López y Edmundo Tito Copa, mediante escrito presentado el 26 de enero de
2012, solicitaron su libertad inmediata, habiendo dispuesto el Juez de la causa, estén al Auto
complementario de 25 de enero de 2012 (fs. 188 a 189).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

Los accionantes alegan la vulneración a su derecho a la libertad, toda vez que, por Auto de 22
de septiembre de 2011, la autoridad Judicial demandada, dispuso la anulación de la
imputación formulada en su contra por la supuesta comisión del delito de fabricación de
sustancias controladas, así como la imposición de medidas cautelares de detención preventiva;
sin embargo, habiendo solicitado su inmediata libertad el 26 de enero de 2012, la autoridad
jurisdiccional, por providencia de 27 de igual mes y año, dispuso se esté al Auto de 25 del
mismo mes y año, complementario a la Resolución de 22 de septiembre de 2011, que aclaró
que los efectos de dicho fallo únicamente alcanzaban a Isaac Pablo Yampara Yampara,
manteniéndose, vigentes la imputación formal y la imposición de medidas cautelares contra
los ahora accionantes. En consecuencia, en revisión de la Resolución dictada por el Juez de
garantías, corresponde dilucidar si tales extremos son evidentes y si constituyen persecución,
aprehensión, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales, a fin de conceder o denegar
la tutela solicitada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

Esta acción es un mecanismo de defensa constitucional extraordinario de carácter preventivo,


correctivo y reparador, instituido para la protección inmediata y efectiva de los derechos
fundamentales a la libertad física como de locomoción en casos de detenciones, persecuciones,
apresamientos o procesamientos ilegales o indebidos por parte de servidores públicos o de
personas particulares; así como a la vida, cuando ésta se encuentra afectada o amenazada por la
restricción o supresión de la libertad.

Está consagrada por el art. art. 125 de la CPE, cuando dispone que: “Toda persona que considere
que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o
privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o
escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier
juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la
persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la
libertad”.

Norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional


Plurinacional (LTCP), la cual establece que el objeto de esta acción extraordinaria es la garantía,
protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el
restablecimiento inmediato y efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos,
suprimidos o amenazados de restricción o supresión.

Teniendo presente la importancia de los derechos primarios protegidos como son la vida y la
libertad física, de manera general no se encuentra regida por el principio de subsidiariedad, al
contrario, se activa sin el previo agotamiento de las vías legales ordinarias, es de tramitación
especial y sumarísima, reforzada por sus características de inmediatez en la protección,
sumariedad, informalismo, generalidad e inmediación; procede contra cualquier servidor público
o persona particular y tampoco reconoce fueros ni privilegios.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 14


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De manera excepcional opera el principio de subsidiariedad ante la existencia de medios de


impugnación específicos e idóneos para restituir de manera inmediata los derechos objeto de su
protección, o bien cuando se activa de manera paralela un medio de defensa previsto en el
ordenamiento jurídico tanto en la vía constitucional como en la ordinaria.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

A partir de la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, se determinó la naturaleza subsidiaria de


manera excepcional del entonces hábeas corpus, refiriendo que: "…en los supuestos en que la
norma procesal ordinaria de manera específica prevea medios de defensa eficaces y oportunos
para resguardar el derecho a la libertad supuestamente lesionado, estos deben ser utilizados,
previamente, circunstancia en la que excepcionalmente, el recurso de hábeas corpus operará de
manera subsidiaria"; este entendimiento, fue modulado por la SC 0008/2010-R de 6 de abril, en
cuanto a los alcances de protección que brinda la actual acción de libertad configurada en el
nuevo texto constitucional, señalando que “…la acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz
para conocer y restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a
la vida, la libertad o constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o ponga
en peligro el derecho a la libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar
de existir mecanismos de protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos
resulten ser evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de
defensa, por la urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir
los derechos afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de
defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la
persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los
afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no
haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas…"
(las negrillas nos corresponden).

III.3. La Resolución que resuelve incidente de nulidad o actividad procesal defectuosa, es


susceptible de apelación incidental

La SC 0636/2010-R de 19 de julio, respecto a la apelación de incidentes de actividad procesal


defectuosa, señaló lo siguiente: “De otro lado el capítulo IV del Título I del libro primero de la
segunda parte del código de procedimiento penal, tiene como nomen juris 'Excepciones e
incidentes', cuyo procedimiento se rige por el art. 314 y ss del CPP, precisando: 'las
excepciones y las peticiones o planteamientos de las partes…', por ello dentro de un sentido
amplio de interpretación de las normas analizadas, encontramos en el art. 403 inc. 2) del CPP,
el derecho a impugnar resoluciones que resuelvan incidentes al incluirse su trámite dentro de
las excepciones e incidentes, dado que sujetarnos a la enunciación que hace dicho precepto,
correspondería a una interpretación restrictiva en desmedro de una norma internacional y de la
propia constitución.

Sin embargo como todos los derechos, el de recurrir está sujeto a las normas generales que lo
rigen, entre ellos la oportunidad o el plazo, el contenido o expresión de agravios y la forma en
que deban formularse. En cuanto a la apelación incidental se la debe presentar y tramitar en
sujeción a las previsiones de los art. 404 a 406 del CPP” (las negrillas nos corresponden).

Por su parte, la SC 1465/2011-R de 10 de octubre, en su Fundamento Jurídico III.3, basando su


razonamiento en la precitada SC 0636/2010-R: “…concluyó que efectivamente el incidente de
actividad procesal defectuosa es apelable conforme al art. 403 inc. 2) del CPP, al incluirse su
trámite dentro de las excepciones e incidentes.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 15


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

(…)

Considerando que el inc. 2) del art. 403 del CPP, establece específicamente como recurrible la
resolución que resuelve la excepción y no así un incidente y tomando en cuenta la
diferenciación que existe entre estas dos figuras procesales y su propia naturaleza jurídica de
ambas; además, convencidos que el sistema procesal penal debe estar más fortalecido y sólido,
justamente por la coyuntura delincuencial e inseguridad ciudadana que pasa el país, éste
Tribunal Constitucional, ve la imperiosa necesidad de una adecuación normativa, a través del
conducto legal pertinente; en este caso, la Asamblea Legislativa Plurinacional, a efectos de que
en mérito a la atribución conferida por el art. 158 de la CPE, modifique el art. 403 del Código
de Procedimiento Penal, e incluya a dicha norma conforme a su naturaleza jurídica, un inciso
que establezca -específicamente- como resolución sujeta a apelación incidental, los incidentes,
y de esta forma pueda concordarse con su aplicación efectiva el alcance al que se refiere el art.
394 del CPP, que establece que, las resoluciones judiciales serán recurribles, únicamente en los
casos establecidos en la Ley 1970; más aún, si tomamos en cuenta que en la práctica forense -
pese de existir la jurisprudencia antes referida- los operadores de justicia, los litigantes e
inclusive algunos Jueces y Tribunales de garantías, siguen interpretando el art. 403 del CPP,
como si éste no reconociera como recurrible un incidente de actividad procesal defectuosa “al
no encontrarse especificados en los incisos de la norma citada”, conllevando a que la justicia
constitucional se active innecesariamente y directamente, perjudicando en distintos aspectos a
la victima, al imputado o en su caso, a la propia administración de justicia ordinaria, a quienes
en todo caso se les debe brindar y reflejar seguridad jurídica”.

La misma Sentencia Constitucional, más adelante acota: “…bajo los antecedentes y necesidades
fundamentales y prioritarias señaladas, la Asamblea Legislativa, debe incluir un inciso
específico dentro del art. 403 del CPP, que se encuentre separado de lo que es una excepción, y
que reconozca al incidente como recurrible vía apelación incidental y de esta forma garantizar
el principio de impugnación reconocida por el art. 180.II de la CPE y que concuerdan
naturalmente con el principio de eficacia, accesibilidad e igualdad de las partes ante el Juez,
por los cuales entre otros principios, se fundamenta la jurisdicción ordinaria como así señala el
párrafo primero de la norma constitucional citada, pues si bien ya existe jurisprudencia como
se explicó ut supra, sin embargo, esta no puede suplir a futuro una situación que
necesariamente debe estar especificada en la Ley; correspondiendo a éste Tribunal
Constitucional, exhortar a la Asamblea Legislativa para los fines jurídicos señalados.

Finalmente, se debe dejar claramente establecido, que el incidente de actividad procesal


defectuosa, debe ser entendido como cualquier otro incidente de nulidad interpuesto dentro de
un proceso penal, este sea, nulidad de notificación o de cualquier otro actuado procesal donde
se identifique un defecto previsto en el art. 167 del CPP y sgts., sin que pueda existir a efectos
de apelación, una distinción entre incidente de actividad procesal defectuosa o incidente de
nulidad que en lo esencial es lo mismo”.

III.4. Análisis del caso concreto

Los accionantes alegan que, habiendo, el Juez de la causa dispuesto por Auto de 22 de
septiembre de 2011, la anulación de la imputación formal e imposición de medidas cautelares,
en resolución del incidente de nulidad por defecto absoluto interpuesto por Isaac Pablo Yampara
Yampara, solicitaron por memorial de 26 de enero de 2012, se emita mandamiento de libertad a
su favor, mereciendo por parte de la autoridad jurisdiccional, estén al Auto complementario de
25 de enero de 2012, que, aclaró que los efectos de la Resolución de 22 de septiembre precitada,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 16


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pues únicamente alcanzaban al incidentista; es decir, a Isaac Pablo Yampara Yampara,


Resolución esta última que, según manifiestan no fue de su conocimiento, situación que vulnera
su derecho a la libertad, al encontrarse indebidamente procesados por no existir imputación
formal en su contra, la cual fuera anulada por el propio Juez de la causa, ahora demandado.

Según informan los datos del proceso, se identifica que los accionantes señalan como acto
vulnerario al derecho reclamado mediante la presente acción de defensa, el hecho de que a pesar
de haberse adherido uno de ellos al incidente de actividad procesal defectuosa suscitado por otro
coimputado, el fallo que resuelve la misma, no los incluyó en la parte resolutiva; sin embargo,
demostrando una actitud pasiva dentro del proceso penal seguido en su contra, pretenden
confundir sin lógica alguna a este Tribunal, manifestando que desconocen dicha Resolución,
pero contrariamente dejan pasar cuatro meses para reclamar su contenido sin considerar, durante
todo ese tiempo que de por medio se encontraba el derecho a la libertad que actualmente
reclaman; ahora bien, conforme la interpretación del Fundamento Jurídico III.3 de la presente
Sentencia Constitucional Plurinacional, la Resolución emanada del incidente de actividad
procesal defectuosa, es apelable conforme prevé el art. 403 del CPP; en este sentido, si los
accionantes consideraban que la Resolución de 22 de septiembre de 2011, lesionaba su derecho
a la libertad, tenían la posibilidad técnica y legal de acudir a la apelación incidental dentro de los
tres días de su notificación o conocimiento y no activar innecesariamente una acción especial
como es la presente.

En estricta coherencia con lo afirmado precedentemente, se tiene que, López Barja de Quiroga,
Jacobo. “Tratado de Derecho Procesal Penal” página 1376, señala que: “…adherirse significa
asociarse y unirse al recurso complementando esfuerzos en pos de un común objetivo, dando
nuevas razones que apoyen la tesis mantenida dentro de los mismos fundamentos…”,
manifestando asimismo que: “…la adhesión ha de coadyuvar, apoyar, reforzar o cooperar con el
recurso principal y, por ello, no son admisibles adhesiones contrapuestas a la del recurso
principal”, razonamientos complementarios a lo prescrito por el art. 397 del CPP, que establece:
“…cuando en una causa existan coimputados, el recurso interpuesto por uno de ellos, favorecerá
a los demás, a menos que los motivos en que se base sean exclusivamente personales”; de lo que
se colige, considerando la importancia y alcance jurídico de una adhesión conforme refleja la
norma y la propia doctrina, que el imputado tenía la obligación de ser diligente en causa propia y
efectuar el seguimiento de la adhesión formulada de su parte; sin embargo, al no haberlo hecho,
es el propio accionante, Wilson Tito López, quien, con su negligencia, se ha colocado en estado
de indefensión; así, el Tribunal Constitucional de España en su Sentencia 0048/1984, ha
señalado que: "…la indefensión no se produce si la situación en la que el ciudadano se ha visto
colocado se debió a una actitud voluntariamente adoptada por él o si le fue imputable por falta
de la necesaria diligencia...”, prueba evidente de lo señalado es que la Resolución cuestionada
data de 22 de septiembre de 2011, misma que, conforme se señaló ut supra, era recurrible.

En coherencia con lo manifestado, se tiene que la complementación de la referida Resolución,


mediante Auto complementario de 25 de enero de 2012, por la cual de oficio, el Juez Tercero de
Instrucción en lo Penal, aclaró que la Resolución de 22 de septiembre de 2011, solamente se
refería en cuanto al imputado Isaac Pablo Yampara Yampara, manteniéndose para los otros
coimputados, ahora accionantes, tanto la imputación formal como las medidas cautelares
inicialmente impuestas en audiencia de medidas cautelares; así definida la situación jurídica del
accionante que se adhirió al incidente principal, el imputado podía activar el derecho a
impugnación que tanto la Constitución Política del Estado, la norma especial y la jurisprudencia
le reconocen; sin embargo, demostrando una actitud pasiva, pretende subsanar la falta de
activación de la apelación prevista en la ley y reconocida como un mecanismo intra procesal
idóneo, presentando un memorial el 26 de enero de 2012, conjuntamente con el otro accionante,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 17


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

solicitando se libre mandamiento de libertad, para posteriormente, el 30 del mismo mes y año,
activar una acción constitucional como si se tratara de otra instancia dentro de la justicia
ordinaria; en todo caso, al ser el Auto complementario parte de la Resolución principal que
resuelve el incidente, si consideraba que vulneraba su derecho, debió proceder conforme a la
jurisprudencia citada en la presente Sentencia.

En este sentido, Wilson Tito López, no hizo usó de los mecanismos intraprocesales específicos,
idóneos, eficientes y oportunos, contemplados en el ordenamiento jurídico vigente, para restituir
el derecho que ahora alega vulnerado; en consecuencia, el actor no puede pretender, por vía de
la acción de libertad, subsanar la negligencia en la que incurrió al no hacer efectivo un
mecanismo establecido por ley para lograr que su derecho a la libertad sea oportunamente
restituido, situación que impide a este Tribunal, ingresar al fondo del asunto.

III.4.1. Por otra parte, es necesario aclarar que, si bien en la acción de libertad ambos
accionantes alegan situaciones similares, según informan los datos del proceso, se constata que
sólo uno de los accionantes, Wilson Tito López, se adhirió al incidente de actividad procesal
defectuosa interpuesto por Isacc Pablo Yampara Yampara y no así Edmundo Tito Copa; en
este sentido, se evidencia que el imputado, ahora accionante, que no se adhirió al incidente
suscitado, tenía expeditos los mecanismos intraprocesales para restablecer el derecho a la
libertad que ahora alega vulnerado, pues de acuerdo al art. 54.1 del CPP, concordante con el art.
74 de Ley del Órgano Judicial (LOJ), el juez cautelar tiene la función de ejercer “el control de la
investigación, conforme a las facultades y deberes previstos en este Código”; normativa que se
complementa con lo establecido en el art. 5 del CPP, que establece que el imputado puede
ejercer la defensa de sus derechos y garantías desde el primer momento del proceso; en mérito a
ello, tenía abierta la posibilidad de activar un mecanismo de defensa establecido en el sistema
procesal penal como es el incidente de “actividad procesal por defectos absolutos”, previsto en
los arts. 169 y 170 concordantes con el art. 167 del referido cuerpo legal, disposiciones legales
que resguardan el derecho de las partes frente a la actividad procesal defectuosa regulan los
supuestos y actos procesales, catalogados como defectos procesales absolutos y relativos,
justamente, para corregir actos procesales defectuosos que puedan afectar derechos
fundamentales y garantías constitucionales; además, si suscitado éste mecanismo persiste la
lesión o se considera que no se ha restablecido el derecho reclamado, existe la posibilidad de
apelar incidentalmente dicha determinación conforme se ha establecido en la jurisprudencia
citada en los Fundamentos Jurídicos III.3 de la presente Sentencia; en consecuencia, al no haber
procedido conforme a ley y agotar las vías previstas por el ordenamiento jurídico previamente
de acudir a la justicia constitucional, respecto a Edmundo Tito Copa, también debe negarse la
tutela por subsidiaridad.

En consecuencia, el Juez de garantías, al denegar la acción de libertad, ha evaluado en forma


correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.- Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.- Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 18


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0002/2012


Sucre, 13 de marzo 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00044-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 37/2012 de 24 de enero de 2012, cursante de fs. 211 a 215 vta.,
pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Cristobal Condori
Acho contra Mario Nava Morales Carrasco, Director Ejecutivo de la Autoridad Regional
de Impugnación Tributaria de Chuquisaca, Marcelo Miranda Vargas, ex Administrador y
Osvaldo Saavedra Gutiérrez, Administrador, ambos de la Aduana Interior Sucre.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 5 de enero de 2012, cursante de fs. 61 a 68 vta., el accionante


asevera lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Refiere el accionante que, dentro del proceso administrativo iniciado en su contra por la Aduana
Interior el 15 de octubre de 2009, se emitió un acta de comiso de su vehículo clase Camión,
marca Nissan, tipo Cóndor, modelo 1996, con datos erróneos como, el número de chasis
MK211K-14477; es decir, que se trataba de otra movilidad y no la suya, lo que originó el inicio
del proceso sin habérsele hecho conocer ningún actuado, menos habérsele designado defensor de
oficio, emitiéndose el 11 de noviembre la Resolución Sancionatoria por contrabando AN-
SUCCI 57/2009, acta de intervención contravencional AN/COA/RCBA C-0331/09, de 11 de
noviembre de 2009, sancionándolo con el comiso del vehículo de referencia y disponiendo el
comiso de otra movilidad distinta a la suya.

Contra dicha Resolución, no se interpuso recurso alguno, adquiriendo por tanto dicha resolución
"ejecutoria", motivo por el cual -de acuerdo al accionante-, ésta no puede ser modificada por
ningún medio; sin embargo, después de más de un año de su ejecutoria, la Aduana Interior de
Sucre se percató que el número de chasis de la movilidad incautada que figura en la indicada
resolución sancionatoria no correspondía a los datos del proceso, lo que originó la modificación
de oficio del citado fallo mediante la Resolución Administrativa (RA) de 7 de abril de 2011,
decisión que autoriza la corrección de la Resolución Sancionatoria en el número de chasis,
indicado MK211k-11477.

En mérito a lo señalado, colige el accionante que al haberse modificado dicha resolución, debió
habérsele notificado, situación que no ocurrió; por el contrario, se notificó a los representantes
del Gobierno Municipal de Santiago de Huata, pronunciando a los cuatro días la RA de
Adjudicación Directa AN-SUCCI-RA-016/2011 de 11 de abril, a través de la cual, se adjudica el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 19


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

bien en comiso al Gobierno Municipal antes señalado, agregando que con esta decisión,
tampoco fue notificado.

En conocimiento de ambas Resoluciones, formuló recurso de alzada ante el Director Ejecutivo


ahora codemandado, quien por Auto de 5 de julio de 2011, rechazó su recurso alegando que
ambos fallos no son impugnables en virtud del art. 198.IV del Código Tributario Boliviano
(CTB), por lo que presentó recurso jerárquico ante la misma autoridad, el cual también fue
rechazado, y contra la cual, se presentó memorial de aclaración y rectificación, manteniendo el
codemandado su decisión mediante Auto de 29 del referido mes y año.

En mérito a los antecedentes expuestos, afirma el accionante que su derecho a la defensa ha sido
vulnerado porque nunca fue notificado con la Resolución Administrativa que autoriza la
corrección de la Resolución Sancionatoria ni con la de adjudicación directa.

Asimismo, afirma que su derecho de impugnación fue transgredido por la autoridad


codemandada al rechazar los recursos que planteó, bajo el argumento que las Resoluciones
mencionadas no son impugnables, señalando además que debió recurrir contra la Resolución
Sancionatoria 57/2009, aspecto que según el peticionante de tutela, desconoce que ambas
resoluciones, emergen de ésta.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

El accionante considera lesionados sus derechos a la defensa, debido proceso, debida


fundamentación de las resoluciones y de impugnación, citando al efecto los arts. 115. II, 117,
119.II y 180.I de la Constitución Política del Estado (CPE) y 8.2 inc. h) de la Convención
Americana de Derechos Humanos (CADH).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción, a cuyo efecto pide se deje sin efecto la RA 017/2011, que autoriza la
corrección de la Resolución Sancionatoria, la RA 016/2011 de adjudicación directa de 11 de abril y
el Auto de rechazo de 5 de julio de 2011 y los Autos de 8, 27 y 29 de julio del mismo año,
solicitando además se le conceda los recursos de alzada y jerárquico.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 24 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
203 a 210 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante ratificó y reiteró los extremos de su demanda, puntualizando que de
conformidad con lo establecido en la SC 2016/2010-R, no es necesario acudir al contencioso
administrativo, quedando abierta la protección de la jurisdicción constitucional.

I.2.2. Informe de los funcionarios demandados

El abogado del Director Ejecutivo de la Autoridad Regional de Impugnación Tributaria de


Chuquisaca sostuvo lo siguiente: a) El derecho a la impugnación es propiamente un principio de
la jurisdicción ordinaria como parte del debido proceso, según determina la SC 1285/2010-R de
26 de septiembre; b) El art. 143 del CTB, señala los actos definitivos contra los que procede el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 20


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

recurso de alzada, teniendo la Autoridad de Impugnación Tributaria una competencia reglada, lo


que significa que sólo puede admitir el recurso de alzada contra los actos administrativos
definitivos; por lo tanto, las Resoluciones Administrativas ahora impugnadas por el accionante,
rectificando el número de chasis y adjudicando el vehículo al municipio de Huata; si bien son
actos administrativos, no son actos administrativos definitivos, por tanto no son impugnables
ante la Autoridad de Impugnación Tributaria al tratarse de actos administrativos de mero
trámite; c) La modificación de la Resolución Sancionatoria 57/2009 fue efectuada por la Aduana
en virtud de la previsión del art. 31 de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), que
faculta a la Administración a realizar correcciones de errores de tipo numérico; d) La
Resolución Administrativa de Adjudicación Directa AN-SUCCI-RA -016/2011 fue realizada en
el marco del Decreto Supremo (DS) 220, que establece el procedimiento para la disposición de
mercancías que tengan comiso definitivo, enmarcándose en la Resolución Ministerial (RM) 185
de 14 de julio de 2010, que aprueba el procedimiento para la autorización de adjudicación
directa de mercancías y vehículos a entidades públicas; y, e) El acto administrativo definitivo es
la Resolución Sancionatoria de contrabando 57/2009 de 11 de noviembre, frente a esta
Resolución procedía recurso de alzada porque definía una situación controversial, pero el ahora
accionante omitió su utilización, precluyendo su derecho a impugnar.

El Administrador y ex Administrador de la Aduana Interior Sucre, a través de su abogado


aseveraron que: 1) El 15 de octubre de 2009, se emitió un acta de comiso del vehículo marca
Nissan, tipo Condor, indocumentado, con placas de control falsas, señalando además que en esa
fecha, se elaboró el respectivo acta de intervención contravencional, actuaciones que fueron
notificadas en secretaría el 21 de octubre de 2009, otorgándosele al accionante un plazo de tres
días hábiles para la presentación de descargos; 2) El 26 de octubre de 2009, se presentó informe
sobre el cumplimiento de plazo para la presentación de descargo, emitiéndose el informe que
establece que el vehículo no se encontraba amparado en ninguna declaración de importación, lo
que dio lugar a la Resolución Sancionatoria en contrabando 57/2009, que declaró probada la
contravención disponiendo el comiso definitivo del vehículo, Resolución que fue notificada en
secretaría, teniendo el ahora accionante veinte días para impugnar la mentada Resolución
Sancionatoria, la cual adquirió ejecutoria por no haber sido impugnada; 3) Es obligación de la
Aduana, una vez concluido el proceso, realizar la adjudicación de mercancías a instituciones del
Estado, como lo establece el art. tres DS 220; en cuya, virtud siguiendo el procedimiento
establecido por la normativa vigente, la Alcaldía de Santiago de Huata, realizó la solicitud
mediante formulario de adjudicación vía internet en el sistema de bienes y comiso definitivo, y a
solicitud del Municipio se emitió el informe técnico aduanero indicando el error en un dígito del
chasis en el certificado de autenticidad de vehículos en Dirección de Investigación y Prevención
de Robo de Vehículos, por lo que se emitió la Resolución 017/2011, que autoriza la
modificación del octavo dígito del chasis con el fin de no continuar con el error involuntario
cometido al momento de transcribir el Acta de Intervención; y, 4) El accionante no ha agotado
los medios previstos por ley, al quedar pendiente aún el contencioso administrativo.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El tercero interesado no se presentó pese de su legal citación.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituida en


Tribunal de garantías, mediante Auto 37/2012 de 24 de enero, cursante de fs. 211 a 215 vta.,
denegó la tutela solicitada bajo los siguientes argumentos: i) El accionante no ha demostrado
que las Resoluciones que ahora impugna se hallen dentro de las resoluciones que pueden ser

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 21


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

recurribles conforme determina el art. 143 del CTB y la Ley 3092; por el contrario, según la
norma prevista en el art. 57 de la LPA, ambos fallos constituyen determinaciones de mero
trámite; ii) El recurso jerárquico formulado por el accionante procede únicamente contra las
resoluciones que resuelven el recurso de alzada; y, III) El accionante debió ejercitar su derecho
de recurrir una vez que fue notificado con la Resolución Sancionatoria de Contrabando,
situación que no ocurrió, lo que demuestra que el accionante no cumplió con el principio de
subsidiariedad.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En el marco de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se procedió al sorteo de la


presente acción el 15 de febrero de 2012, cuyo vencimiento es el 16 de abril del indicado año; en
consecuencia, la presente Resolución se pronuncia dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. El 15 de octubre de 2009, a horas 11:00 aproximadamente, agentes del Control Operativo
Aduanero (COA) en servicio de patrullaje de control de mercadería y vehículos
indocumentados, intervinieron en la zona de la Terminal de buses de la ciudad de Sucre, el
vehículo clase camión de color blanco, marca Nissan tipo Cóndor, subtipo UD, con chasis
MK211K-14477, con placa de control 1703-CNC, modelo 96, conducido por Cristobal Contori
Acho -ahora accionante-, dicha intervención fue realizada por no contar con documentación
respaldatoria, firmando en el acta de comiso, en calidad de propietario (fs. 1). En la misma fecha
se emitió el acta de intervención contravencional AN/COA/RCBA C-0331/09 (fs. 2 a 3),
realizándose la entrega e intervención del vehículo decomisado a los responsables del
concesionario de Depósito Aduanero ALBO (fs. 4).

II.2. El 21 de octubre de 2009, con el acta de intervención contravencional AN/COA/RCBA C-


0331/09, se notificó al accionante en Secretaría de la Aduana Nacional, otorgándole el plazo de
tres días para la presentación de descargos (fs. 7), no existiendo constancia de que hubiere
presentado los descargos requeridos que acrediten la importación del vehículo.

II.3. El 11 de noviembre de 2009, el Administrador de la Aduana a.i., ahora codemandado,


emitió la Resolución Sancionatoria en Contrabando AN-SUCCI 57/2009, declarando probada la
comisión de contravención aduanera por contrabando disponiendo el comiso del vehículo clase
"camión de color blanco, marca Nissan tipo Cóndor, industria Japón, Nº de chasis MK211K-
14477, con placa de control 1703-CNC (dato erróneo), modelo 96" (fs. 8 a 10). Resolución que
fue notificada en Secretaría de la Aduana (fs. 11).

II.4. A través de la RA 017/2011, se autorizó la modificación del octavo dígito del chasis por
existir un error material e involuntario.

II.5. Mediante RA de Adjudicación Directa 017/2011 de 11 de abril, se adjudicó el bien en


comiso al Gobierno Municipal de Santiago de Huata.

II.6. Contra la Resolución sancionatoria de contrabando 57/2009 de 11 de noviembre, el


accionante no activó ningún mecanismo de impugnación.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 22


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.7. El ahora accionante, formuló recurso de alzada ante el Director Ejecutivo ahora
demandado, contra las Resoluciones Administrativa de corrección y de adjudicación, el cual es
rechazado por Auto de 5 de julio de 2011. En mérito a esta decisión, el peticionante de tutela,
presentó recurso jerárquico ante la misma autoridad, recurso que también fue rechazado. Contra
esta última decisión, el accionante presentó memorial de aclaración y rectificación, el mismo
que es resuelto mediante Auto de 29 de julio de 2011.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración de sus derechos a la defensa, al debido proceso y a la


impugnación, denunciando lo siguiente: a) Que no se le notificó con la RA de Adjudicación
Directa 017/2011, a través de la cual, se autoriza la modificación del octavo dígito
correspondiente al chasis del vehículo objeto de comiso, ni con la Resolución de adjudicación
directa de su vehículo al Gobierno Municipal de Huata; y b) Su derecho de impugnación fue
transgredido por la autoridad co-demandada al rechazársele los recursos interpuestos con el
argumento de ser las decisiones cuestionadas inimpugnables.

III.1. La acción de amparo constitucional. Su configuración constitucional

El orden constitucional boliviano, dentro de las acciones de defensa, instituye en el art. 128 la
acción de amparo constitucional como un mecanismo de defensa que tendrá lugar contra los
"actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley".

Del contenido del texto constitucional de referencia, puede inferirse que la acción de amparo
constitucional es un mecanismo de defensa jurisdiccional, eficaz, rápido e inmediato de
protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, cuyo ámbito de
protección se circunscribe respecto de aquellos derechos fundamentales y garantías, que no se
encuentran resguardados por los otros mecanismos de protección especializada que el mismo
orden constitucional brinda a los bolivianos, como la acción de libertad, de protección de
privacidad, popular, de cumplimiento, etc. Asimismo, desde el ámbito de los actos contra los
que procede, esta acción se dirige contra aquellos actos y omisiones ilegales o indebidos
provenientes no sólo de los servidores públicos sino también de las personas individuales o
colectivas que restrinjan o amenacen restringir los derechos y garantías objeto de su protección.

En este contexto, el amparo constitucional boliviano en su dimensión procesal, se encuentra


concebido como una acción que otorga a la persona la facultad de activar la justicia
constitucional en defensa de sus derechos fundamentales y garantías constitucionales.

El término de acción no debe ser entendido como un simple cambio de nomenclatura, que no
incide en su naturaleza jurídica, pues se trata de una verdadera acción de defensa inmediata,
oportuna y eficaz para la reparación y restablecimiento de los derechos y garantías
fundamentales, y dada su configuración, el amparo constitucional se constituye en un proceso
constitucional, de carácter autónomo e independiente con partes procesales diferentes a las del
proceso ordinario o por lo menos con una postura procesal distinta, con un objeto específico y
diferente, cual es la protección y restitución de derechos fundamentales con una causa distinta a
la proveniente del proceso ordinario, esto es, la vulneración concreta o inminente de derechos
fundamentales a raíz de actos y omisiones ilegales o indebidos con un régimen jurídico procesal
propio.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 23


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En este orden de ideas, la acción de amparo constitucional adquiere las características de


sumariedad e inmediatez en la protección, por ser un procedimiento rápido, sencillo y sin
ritualismos dilatorios. A estas características se añade la de generalidad, a través de la cual la
acción puede ser presentada sin excepción contra todo servidor público o persona individual o
colectiva.

Finalmente cabe señalar, que dentro de los principios procesales configuradores del amparo
constitucional, el constituyente resalta la inmediatez y subsidiariedad al señalar en el parágrafo I
del art. 129 de la CPE, que esta acción "(…) se interpondrá siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados".

Lo señalado implica que la acción de amparo forma parte del control reforzado de
constitucionalidad o control tutelar de los derechos y garantías, al constituirse en un mecanismo
constitucional inmediato de carácter preventivo y reparador destinado a lograr la vigencia y
respeto de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, siempre que no exista otro
medio de protección o cuando las vías idóneas pertinentes una vez agotadas no han restablecido
el derecho lesionado, lo que significa que de no cumplirse con este requisito, no se puede
analizar el fondo del problema planteado y, por tanto, tampoco otorgar la tutela.

III.2. La tutela del derecho al debido proceso, a la defensa y a la impugnación a través de


la acción de amparo constitucional

En el orden de ideas citado también debe señalarse que la acción de amparo constitucional,
encuentra fundamento directo en el artículo 25.1 de la CADH, instrumento que señala: "Toda
persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso efectivo ante los
jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos
fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la presente Convención, aún cuando tal
violación sea cometida por personas que actúen en ejercicio de sus funciones oficiales". En el
marco del citado precepto que forma parte del Bloque de Constitucionalidad reconocido por el
artículo 410 de la CPE, se tiene que la dimensión procesal constitucional de la acción de amparo
constitucional debe ser estructurada a partir de este marco de disposiciones, siendo evidente que
el amparo constitucional constituye un mecanismo eficaz de defensa para el resguardo de
derechos fundamentales insertos en el bloque de constitucionalidad.

Ahora bien, una vez descrita la dimensión procesal de la acción de amparo constitucional,
corresponde ahora establecer su idoneidad para la tutela de los derechos al debido proceso, a la
defensa y a la impugnación.

En el orden de ideas señalado, se tiene que el derecho al debido proceso, puede ser tutelado a
través de la acción de amparo constitucional, en ese orden, corresponde en este estado de cosas
definir al debido proceso, vinculado con los derechos a la defensa y a la impugnación, por tanto,
es menester señalar que la SC 1674/2003-R de 24 de noviembre, entre otras, define al debido
proceso como: "…el derecho de toda persona a un proceso justo y equitativo, en el que sus
derechos se acomoden a lo establecido por disposiciones jurídicas generales aplicables a todos
aquellos que se hallen en una situación similar; comprende la potestad de ser escuchado
presentando las pruebas que estime convenientes en su descargo (derecho a la defensa) y la
observancia del conjunto de requisitos de cada instancia procesal, a fin de que las personas
puedan defenderse adecuadamente ante cualquier tipo de acto emanado del Estado que pueda
afectar sus derechos. Se entiende que el derecho al debido proceso es de aplicación inmediata,
vincula a todas las autoridades judiciales o administrativas y constituye una garantía de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 24


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

legalidad procesal que ha previsto el Constituyente para proteger la libertad, la seguridad


jurídica…". Debido proceso que conforme ha establecido adquiere una triple dimensión:
principio, derecho y garantía constitucional.

III.3. Análisis del caso

Corresponde a la luz de las consideraciones de orden jurídico-constitucional desarrolladas


analizar los dos aspectos denunciados en la acción de amparo, de acuerdo a lo siguiente:

III.3.1. En cuanto a la denuncia de vulneración al derecho a la defensa por la supuesta


falta de notificación con la Resolución 017/2011

En cuanto a esta denuncia, en la especie debe considerarse lo siguiente: el 11 de noviembre de 2009,


el Administrador de la Aduana a.i., ahora codemandado, emitió la Resolución sancionatoria de
contrabando AN-SUCCI 57/2009, declarando probada la comisión de contravención aduanera por
contrabando, disponiendo el comiso del vehículo cuyos datos, en cuanto a la numeración del chasis,
son erróneos en el octavo dígito, esta resolución fue notificada al ahora accionante en secretaría de la
Aduana.

Ahora bien, a través de la Resolución 017/2011, por el error material en el último dígito de la
numeración del chasis, se autoriza la corrección material de este dato, en ese contexto, el
accionante, denuncia que no fue notificado con esta decisión, afectándose así su derecho a la
defensa; sin embargo, de la compulsa de antecedentes, se evidencia que el ahora accionante
formuló recurso de alzada ante el Director Ejecutivo ahora demandado, el cual fue rechazado
por Auto de 5 de julio de 2011; asimismo, se evidencia también que el peticionante de tutela,
presentó recurso jerárquico ante la autoridad antes señalada, recurso que también fue rechazado,
razón por la cual, el accionante presentó memorial de aclaración y rectificación, el mismo que
fue resuelto mediante Auto de 29 de julio de 2011.

Por lo señalado, las impugnaciones efectuadas por el propio accionante, cuyo plazo de
activación no es cuestionado en las resoluciones que las resuelven, son los elementos esenciales
para establecer que en el caso concreto no se dejó al accionante en estado de indefensión y por
tanto no se afectó las reglas del debido proceso ni el derecho a la defensa de acuerdo a los
presupuestos establecidos por la SC 1674/2003-R, cuya ratio decidendi ya fue desarrollada en el
Fundamento Jurídico III.2 de la presente sentencia.

III.3.2. En cuanto a la denuncia de vulneración al derecho de impugnación por el rechazo


de los recursos interpuestos por el accionante

En lo referente a esta denuncia, corresponde señalar que el Código Tributario, en el marco de las
reglas del debido proceso, establece los presupuestos procesales para la actuación de la
Administración Aduanera, en ese orden, corresponde señalar que el artículo 143 del CTB,
normativa adjetiva aplicable al caso de autos, señala taxativamente lo siguiente: "El Recurso de
Alzada será admisible sólo contra los siguientes actos definitivos: 1. Las Resoluciones
determinativas. 2. Las Resoluciones Sancionatorias. 3. Las resoluciones que denieguen
solicitudes de exención, compensación, repetición o devolución de impuestos. 4. Las
resoluciones que exijan restitución de lo indebidamente devuelto en los casos de devoluciones
impositivas. 5. Los actos que declaren la responsabilidad de terceras personas en el pago de
obligaciones tributarias en defecto o en lugar del sujeto pasivo".

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 25


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el marco de lo señalado, es menester establecer que el accionante, denuncia como vulnerado


su derecho de impugnación al habérsele rechazado los recursos interpuestos con el argumento de
ser, las decisiones cuestionadas inimpugnables.

En el marco de lo establecido, debe señalarse que la Resolución 017/2011, a través de la cual se


corrige un error material consignado en la Resolución sancionatoria en contrabando AN-SUCCI
57/2009, no se configura como un acto administrativo de carácter definitivo; es decir, no
constituye ni extingue derechos a favor o contra el administrado, sino que subsana un error
material consignado en un acto administrativo como es el caso de la Resolución sancionatoria
arriba señalada.

Por lo señalado, se establece que precisamente por las razones antes expuestas, la Resolución
017/2011, no se encuentra dentro de las decisiones objeto de impugnación reguladas por el
artículo 143 del CTB, por cuanto, su rechazo por la autoridad ahora demandada, de ninguna
manera afecta el derecho al debido proceso, a la defensa ni al derecho a recurrir, por tal razón,
los presupuestos establecidos para las reglas del debido proceso en la SC 1674/2003-R, cuya
ratio decidendi ya fue desarrollada en el Fundamento Jurídico III.2, no fueron conculcados en el
caso concreto.

Por lo precedentemente señalado, el Tribunal de garantías al haber denegado la acción de


amparo constitucional, ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y
aplicado debidamente los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de conformidad con el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: DENEGAR la tutela
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0003/2012


Sucre, 13 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de Libertad
Expediente: 00028-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 02/2012 de 20 de enero, cursante de fs. 13 vta. a 15 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Guido Colque Villca en representación de
Jovana Rodríguez Rivero y Josefina Viveros Cabrera contra Freddy Villarroel Gutiérrez,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 26


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Comandante del Distrito Policial 5 de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen


(FELCC) de la Villa Primero de Mayo y Mamerto Mojica Cabrera.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 19 de enero de 2012, cursante de fs. 3 a 4, el accionante señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A horas 08:00 aproximadamente de la indicada fecha, sus representadas se encontraban en


su domicilio, cuando abruptamente, Mamerto Mojica Cabrera conjuntamente funcionarios
policiales encapuchados dependientes del Distrito Policial 5 del módulo de la Villa Primero
de Mayo, ingresaron al inmueble sin exhibir mandamiento alguno y peor aún, sin
informarles el motivo de su detención, las enmanillaron y las condujeron a dependencias de
la Policía, encontrándose en dicho lugar incomunicadas sin conocer de su situación; es
decir, sin saber qué fiscal o juez se encuentra a cargo de su caso y con el agravante de que
ya transcurrieron más de ocho horas de su detención.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de los derechos de sus representadas a la libertad, a la


seguridad jurídica, a la defensa y al debido proceso, sin citar la norma constitucional que los
contiene.

I.1.3. Petitorio

Se solicita se conceda la tutela y se extienda en su favor el correspondiente mandamiento de


libertad; con responsabilidad civil.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 20 de enero de 2012, conforme consta en el acta corriente de


fs. 12 a 13 de obrados, se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ampliación de la acción

La parte accionante ratificó la acción planteada y ampliando la misma, señaló que: a) La Fiscal
de Materia llegó a instalaciones de la Policía a horas 18:00, y al tener conocimiento de la
vulneración de los derechos de las accionantes dispuso la cesación de su arresto; y, b) Ante la no
existencia de delito flagrante, no impera el allanamiento de domicilio.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Freddy Villarroel Gutiérrez, Comandante de la FELCC de la Villa Primero de Mayo, por informe
escrito cursante a fs. 11 y vta., indicó que: 1) Las accionantes incumplieron un acta de buena
conducta suscrito con una tercera persona el 3 de noviembre de 2011, situación por la que se
dispuso el arresto de ocho horas; posteriormente y antes de cumplir con el plazo señalado, se
remitió a las arrestadas con acción directa ante la Fiscal de la Villa Primero de Mayo, al tener

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 27


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conocimiento de que existía una denuncia por tentativa de homicidio; y, 2) La autoridad fiscal
ordenó la libertad de las mismas al cumplir las ocho horas de arresto.

I.2.3. Resolución

Mediante Resolución 02/2012 de 20 de enero, cursante de fs. 13 vta. a 15 vta., el Juez Séptimo
de Sentencia y de Partido en lo Penal Liquidador de la ciudad de Santa Cruz, denegó la acción
de libertad, argumentando que: i) De acuerdo a lo expuesto, el presente caso deviene de un
problema anterior que hubieran tenido las accionantes con algún ciudadano o ciudadana, no
habiéndose mencionado cual es el caso o la denuncia policial; ii) El memorial de solicitud de
cesación de arresto cumplió su cometido, es decir, que fueron liberadas como se evidencia por la
Resolución dictada por la Fiscal y corroborado por el abogado defensor del accionante quien
dice que se las liberó a horas 20:00 del mismo día; y, iii) La Policía Boliviana cumplió con el
término previsto por ley de ocho horas de arresto, ya que esa instancia tiene facultad de arrestar.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En vigencia plena de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, el presente expediente se


sorteó el 15 de febrero de 2012.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Por informe de acción directa de 19 de enero de 2012, se tiene que los funcionarios
policiales Franz Quispe Ruiz y Adrian Guarachi, al conocer la denuncia de Mamerto Mojica,
arrestaron a las accionantes a horas 11:45 de la misma fecha (fs. 9 y vta.).

II.2. Mediante memorial presentado el 19 de enero de 2012 a horas 18:30, Jovana Rodríguez
Rivero y Josefina Viveros Cabrera, por intermedio de su abogado, solicitaron al Fiscal de la
FELCC, la cesación de su arresto, al haberse cumplido las ocho horas que la ley establece (fs.
10).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de los derechos de sus representadas a la libertad, a la


seguridad jurídica, a la defensa y al debido proceso, toda vez que, el 19 de enero de 2012,
Mamerto Mojica Cabrera conjuntamente funcionarios policiales encapuchados, ingresaron al
domicilio de estas sin exhibir mandamiento alguno procediendo a su arresto; situación que se
prolongó más de las ocho horas previstas por ley.

En consecuencia, corresponde analizar, si en el presente caso, se debe ingresar o no al fondo de


la problemática planteada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

La acción de libertad, es un mecanismo de defensa constitucional extraordinario de carácter


preventivo, correctivo y reparador, instituido para la protección inmediata y efectiva de los
derechos fundamentales a la libertad física como de locomoción en casos de detenciones,
persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o indebidos por parte de servidores

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 28


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

públicos o de personas particulares; así como a la vida, cuando ésta se encuentra afectada o
amenazada por la restricción o supresión de la libertad.

Está consagrada por el art. art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE), cuando dispone
que: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o
que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de
Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna
formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que
se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales
o se restituya su derecho a la libertad”.

Norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional


Plurinacional (LTCP), la cual establece que el objeto de esta acción extraordinaria es la garantía,
protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el
restablecimiento inmediato y efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos,
suprimidos o amenazados de restricción o supresión.

Teniendo presente la importancia de los derechos primarios protegidos como son la vida y la
libertad física, de manera general no se encuentra regida por el principio de subsidiariedad; al
contrario, se activa sin el previo agotamiento de las vías legales ordinarias, es de tramitación
especial y sumarísima, reforzada por sus características de inmediatez en la protección,
sumariedad, informalismo, generalidad e inmediación; procede contra cualquier servidor público
o persona particular y tampoco reconoce fueros ni privilegios, correspondiendo conocer y
resolver dicha acción constitucional, al juez en materia penal debido al principio de especialidad
reconocido en la Ley Fundamental.

De manera excepcional opera el principio de subsidiariedad ante la existencia de medios de


impugnación específicos e idóneos para restituir de manera inmediata los derechos objeto de su
protección, o bien cuando se activa de manera paralela un medio de defensa previsto en el
ordenamiento jurídico, es decir, tanto en la vía constitucional como en la ordinaria.

III.2. Inadmisibilidad de activar dos jurisdicciones simultaneas

Conforme prevé el art. 179.III de la CPE, la justicia constitucional será ejercida por el Tribunal
Constitucional Plurinacional, institución que por mandato de lo establecido por el art. 196 de la
Norma Suprema, velará por la supremacía de la Constitución Política del Estado, ejercerá el
control de constitucionalidad y precautelará el respeto y la vigencia de los derechos y las
garantías constitucionales; en este sentido, el Tribunal Constitucional Plurinacional, tiene un
estatus de órgano constitucional independiente y distinto al de los demás, de manera que, en el
ejercicio de su función jurisdiccional, no está subordinado ni sometido sino a la Ley
Fundamental y a las leyes; razón por la cual, todo ciudadano que pretenda acudir y activar a un
órgano tan importante como es este Tribunal, debe hacerlo previamente acudiendo a instancias
legales reconocidas y previstas por ley como sucedió en el presente caso; sin embargo, es deber
del sujeto legitimado, el exigir la respuesta de su solicitud a la autoridad de la jurisdicción
distinta a la constitucional, la cual en su efecto jurídico, puede restituir o restablecer el derecho
presuntamente cuestionado y vulnerado.

Con la misma lógica, y considerando los nuevos retos de un Tribunal Constitucional


Plurinacional, es importante no activar innecesariamente esta jurisdicción, en la nueva coyuntura
constitucional plurinacional, se ve la necesidad de fortalecer otros aspectos inherentes al nuevo
modelo de Estado plasmado en la Norma Fundamental; por eso mismo, es imperioso que las

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 29


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

controversias que podrían conllevar a suscitar una acción constitucional, previamente sean
resueltas y “respondidas” en las instancias establecidas en nuestro ordenamiento jurídico, ya sea
un vocal, un juez y el propio Ministerio Público, pero claro está, antes de activar una acción
tutelar.

Bajo la misma coherencia constitucional, en un caso análogo, la SC 0608/2010-R de 19 de julio,


la cual se encuentra acorde y compatible a la Constitución Política del Estado, señaló: “...para
que se abra la tutela que brinda esta acción, es preciso que previamente se determine si existen
los medios de impugnación específicos e idóneos para restituir el derecho a la libertad en forma
inmediata, pero además de ello, se debe considerar también que cuando quien recurre de
hábeas corpus, acciona en forma paralela un medio de defensa previsto en el ordenamiento
jurídico, aún en el supuesto de que dicho medio o recurso no sea el más idóneo, eficaz o
inmediato, es lógico suponer que tampoco procede esta acción tutelar en aplicación de la
excepción de subsidiariedad, ello debido a que el recurrente, actual accionante, no puede
activar dos jurisdicciones en forma simultánea para efectuar sus reclamos, no siendo admisible
dicha situación que de ocurrir inviabiliza la acción tutelar, pues al activar en forma simultánea
la jurisdicción ordinaria y la jurisdicción constitucional, para que ambas conozcan y resuelvan
las irregularidades denunciadas, se crearía una disfunción procesal contraria al orden
jurídico".

Es oportuno y prudente señalar que, si bien nos encontramos bajo un nuevo sistema
constitucional y un nuevo órgano de control de constitucionalidad como es este Tribunal, ello no
impide la aplicación de jurisprudencia constitucional anterior, claro está, siempre y cuando no
contradiga y no sea incompatible con el espíritu plurinacional, los principios y valores de la
Norma Suprema; jurisprudencia que ira mutando según se vaya desarrollando y consolidando el
nuevo sistema de justicia plurinacional que se implementará a partir de la nueva Ley
Fundamental, que es la principal instancia legitimadora del modelo de Estado de Derecho
Plurinacional.

En este sentido, la trascendencia fundacional, moral, jurídica, política, institucional de derechos


y del sistema de justicia, deberá constituir como punto de partida de la nueva doctrina y
jurisprudencia constitucional, que dé solidez al nuevo ambiente constitucional, misma que será
necesariamente de forma progresiva y según las controversias jurídicas y políticas que lleguen a
este Tribunal Constitucional Plurinacional, aclarando nuevamente que, la jurisprudencia del
anterior Tribunal, será aplicable únicamente cuando sea compatible y coherente con la
Constitución.

III.3. Análisis del caso concreto

El accionante alega que sus representadas, fueron arrestadas por más de ocho horas, previo
allanamiento de su domicilio.

Ahora bien, para el análisis de la presente problemática, previamente debemos remitirnos al art.
45 de la Ley Orgánica del Ministerio Público (LOMP), norma que establece que el fiscal de
materia tiene la atribución de ejercer la dirección funcional de la actuación policial y supervisar
la legalidad de las actividades de la investigación; disposición que se encuentra acorde con el
art. 76 de la citada Ley, al aclarar que los miembros pertenecientes a organismos que ejerzan
actividad de Policía Judicial deberán desempeñar sus funciones bajo la dirección funcional del
fiscal.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 30


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Consiguientemente, a la luz de una interpretación literal de la norma y bajo la premisa de la


naturaleza de la función de los fiscales de materia, se tiene claro que esta autoridad, tiene la
atribución de velar y supervisar la legalidad de las actividades realizadas por los efectivos y
miembros de la Policía Nacional Boliviana, aclarando que esta facultad conferida por la ley
especial y la orgánica, no significa que necesariamente tenga que existir una investigación
aperturada, los funcionarios policiales tienen la facultad de proceder a la intervención mediante
“la acción directa”, también el deber de comunicar sobre su accionar al fiscal de turno
respectivo, como sucedió en el presente caso; razón por la cual, según informan los datos del
proceso, se evidencia que las representadas del accionante, solicitaron al Fiscal de Materia de la
Villa Primero de Mayo, la cesación de su arresto, pero paralelamente activaron la presente
acción constitucional con idéntica pretensión jurídica, pretendiendo que tanto el Ministerio
Público como este Tribunal se pronuncien sobre el mismo hecho, lo que conllevaría a la
posibilidad de que existan dos resoluciones paralelas creando una disfunción procesal contraria
al nuevo sistema jurídico y constitucional, más aún si se constata que la acción de libertad fue
interpuesta el 19 de enero de 2012 a horas 16:05 y la solicitud de cesación de arresto el mismo
día a horas 18:30; además de ello, el hecho de que el accionante consiguió y consolidó la
pretensión jurídica de sus representadas, acudiendo al Director Funcional de la investigación y
representante del Ministerio Público; consiguientemente, la interpretación y la jurisprudencia del
Fundamento Jurídico III.2 de la presente Sentencia, son aplicables al haberse evidenciado la
activación paralela de dos instancias distintas previstas en el ordenamiento jurídico boliviano.

Por otra parte y con carácter aclaratorio, el accionante no probó la existencia de una
investigación y por tanto, no se encuentra certeza de un control jurisdiccional por parte de un
juez de instrucción, en ese caso, previamente debió acudir a éste e incluso al de turno como
establece la jurisprudencia; sin embargo y como se dijo, fue el representante del Ministerio
Público quien dio curso a la pretensión de las representadas del accionante.

III.4. Finalmente, con referencia al allanamiento alegado y en coherencia con el fundamento que
antecede, previamente debemos remitirnos a la jurisprudencia constitucional, la cual -como se
dijo-, no es contraria al nuevo ambiente constitucional; así, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo,
que unificó las subreglas de subsidiariedad generadas por la jurisprudencia del Tribunal
Constitucional en acciones de libertad, tratándose de procesos penales, estableció tres supuestos
en los que de manera excepcional, no es posible ingresar al análisis de la presente acción, por
existir otros medios de protección del derecho a la libertad: a) Lesiones al derecho a la libertad
física (por ejemplo aprehensiones fiscales y policiales) cometidas antes de la imputación formal,
que deben ser denunciadas ante el juez cautelar; b) Resoluciones de medidas cautelares que
deben ser impugnadas a través del recurso de apelación o lesiones al debido proceso vinculadas
al derecho a la libertad física y que causen indefensión absoluta, que deben ser reclamadas ante
la autoridad judicial que conoce la causa; y, c) Planteamiento simultáneo de solicitudes
vinculadas a la modificación de medidas cautelares y del recurso de hábeas corpus, ahora acción
de libertad.

Respecto al primer supuesto, dicha Sentencia señaló:

“Primer supuesto:

Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía cometieron


arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía no existe
aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez Cautelar de
turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el
aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 31


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De no ser así,
se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a través del
legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en el control
de la investigación” (las negrillas nos pertenecen).

Consiguientemente, si el accionante considera que el allanamiento del domicilio de sus


representadas vulnera los derechos alegados mediante la presente acción, previamente debió
acudir al juez de instrucción en lo penal de turno, justamente aplicando el entendimiento de la
interpretación y presupuesto desarrollado en la jurisprudencia citada; o en su caso, tenía la
obligación de demostrar y probar la existencia de una investigación abierta y así acudir al juez
cautelar que se encuentre bajo el control jurisdiccional de la misma; en este sentido, la parte
accionante, antes de acudir a esta jurisdicción constitucional, tenía la posibilidad de escudarse
ante la jurisdicción ordinaria y de esta forma, solicitar el restablecimiento de sus derechos
fundamentales y garantías constitucionales; pero, al no hacerlo y contrariamente haber activado
un mecanismo constitucional y especial como es la acción de libertad, no ha cumplido con la
subsidiaridad; principio que se encuentra acorde y conexo con la argumentación constitucional y
la jurisprudencia plasmada en el Fundamento Jurídico III.2 de la presente Sentencia
Constitucional Plurinacional; por lo tanto, no es posible conceder la tutela.

En consecuencia, el Juez de garantías, al haber denegado la acción de libertad, ha evaluado en


forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0004/2012


Sucre, 13 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de Libertad
Expediente: 00026-2012-01-AL
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 01/2012 de 17 de enero cursante de fs. 157 a 159, pronunciada, dentro de
la acción de libertad interpuesta por Erick Villca Monje contra Edwin Padilla Flores, Fiscal de
Materia de Riberalta.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 32


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 16 de enero de 2012, cursante de fs. 15 a 17 vta. de obrados, el


accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 12 de enero del mismo año, aproximadamente a horas 20:00, encontrándose el accionante en la


Plaza “Santa Cruz” en compañía de un amigo de infancia, unos sujetos armados sin identificarse
les dijeron que se tiren al suelo, para posteriormente maniatarlos y conducirlos a un vehículo donde
se encontraba la autoridad demandada, quien le preguntó qué hacía en compañía del asaltante de la
oficina PRENDAMAS, respondiéndole que era su amigo y que se conocían desde octavo curso, a
lo que el Fiscal le dijo: “coopera con nosotros y nada te va a pasar, vos tenes una niña pensa en
ella” y ante su respuesta negativa, uno de los sujetos le increpó con una serie de improperios.

Posteriormente señala que fueron llevados por la carretera Riberalta-Guayaramerín; al detenerse,


los policías torturaron a su amigo y golpearon al accionante, para luego conducirlos a oficinas de la
Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), donde fueron vejados y torturados por un
policía cuyo nombre desconoce, pero que podría identificar; encerrado en una celda, siguió siendo
golpeado y enmanillado a la fuerza, estampó su huella digital en un documento.

En consecuencia el accionar del Fiscal y de los funcionarios policiales vestidos de civiles, violaron
sus derechos, al viejo estilo de los gobiernos de facto, al permitir que sea vejado, amenazado,
privado de su libertad y detenido ilegalmente, sin existir mandamiento emanado por autoridad
competente; además, al momento de su ilegal detención, no fue informado de la razón de la
privación de su libertad, ni fue notificado.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

El accionante estima como vulnerados sus derechos a la vida, libertad personal y la garantía de
presunción de inocencia; citando al efecto los arts. 22, 23.I, II, III, V y VI, 114 y 116 de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la presente acción y se disponga su inmediata libertad. Sea conducido, a los
fines de la audiencia establecida en la norma constitucional, desde celdas de la FELCC de la
ciudad de Riberalta, donde guarda detención indebida y se encuentra privado de su libertad
personal.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de enero de 2012 en dependencias de la Policía de Riberalta, a


la que acudieron por no haber sido trasladado el accionante, según consta en el acta de fs. 155 a
156 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 33


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, en audiencia ratificó y amplió los términos expuestos en su demanda de
acción de libertad, indicando que se siguen violando las garantías constitucionales de su cliente que
no fue llevado a la audiencia y obligando a la Juzgadora a constituirse en ese recinto penitenciario.

Las garantías fueron vulneradas con participación directa del Fiscal, en complicidad con los
funcionarios policiales. El 9 de enero de 2012, se libra una orden de aprehensión y en la noche es
detenido, conociéndose, que sólo en los delitos flagrantes podrá hacer persecución nocturna,
entregando en calidad de prueba la Resolución de aprehensión, señalando además que el Ministerio
Público tiene seis meses para investigar y no debe torturar.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Edwin Padilla Flores, Fiscal de Materia de la localidad Riberalta, del departamento de Beni,
informó que a raíz del informe del Policía asignado al caso, de 9 de enero de 2012, donde se
establece que Erick Villca Monje es con probabilidad autor del hecho delictivo de robo agravado
ocurrido en instalaciones de PRENDAMAS Regional Riberalta, se procedió a emitir la Resolución
de aprehensión de la misma fecha, dirigida contra el accionante en cumplimiento del art. 226 del
Código de Procedimiento Penal (CPP), toda vez que existía denuncia e investigación abierta.

Aclara que la aprehensión fue realizada el 13 de enero de 2012 a horas 12:30 en el barrio “El Sol”
y no en la plaza “Santa Cruz”, conforme al acta de aprehensión efectuada por la Policía, que cursa
en el cuaderno de investigación y por informe policial de la misma fecha, se tiene demostrado que
el ahora accionante, habría recibido una gran cantidad de SMS (mensajes de texto), que
demuestran de manera categórica la participación en el ilícito suscitado.

Tomada la declaración informativa de Erick Villca, en la cual se abstiene de declarar, el Fiscal de


Materia presentó imputación formal de acuerdo a procedimiento, y el Juez competente instaló
audiencia para considerar las medidas cautelares el 14 de enero de 2012 a horas 14:00, y a raíz de
ésta que el imputado guarda detención preventiva en las celdas de la carceleta pública de la
localidad de Riberalta. Negando las torturas y vejaciones acusadas por el accionante, quien no
presentó ninguna prueba ni rasgo de maltrato físico.

Por último indica que el accionante debió interponer la acción contra el juez o contra los policías,
solicitando se deniegue la presente acción.

I.2.3. Resolución

La Jueza de Partido Mixto de Riberalta del Tribunal Departamental de Beni, por Resolución
01/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 157 a 159, denegó la acción de libertad, con el fundamento
que: a) Los jueces de instrucción son competentes para ejercer el control de la investigación y
verificar si se guardan las formalidades legales en las detenciones puestas a su conocimiento; b) El
Juez cautelar dicto el Auto de 14 de enero de 2012 en el que ordena la detención del accionante,
acreditando que fue puesto a disposición de esta autoridad judicial, por lo que debió dirigir su
acción contra éste; y, c) Contra la Resolución del Juez cautelar procede el recurso de apelación
incidental, que la Juzgadora desconoce si fue utilizada o no.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 34


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En vigencia de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se realizó el sorteo del presente
proceso el 15 de febrero de 2012, por lo que el pronunciamiento de la sentencia se encuentra
dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. El 9 de enero de 2012, el funcionario de la FELCC, eleva informe al Fiscal, por el cual
presume que Erick Villca sería con probabilidad, el autor intelectual y material del robo agravado a
la empresa PRENDAMAS (fs. 126). En la misma fecha, el Fiscal demandado dictó la Resolución
Fiscal de Aprehensión del accionante (fs. 152), emitiendo la respectiva Orden de Aprehensión (fs.
127 y vta.).

II.2. Después de un proceso de investigación realizado por el personal de la FELCC, bajo la


dirección de Edwin Padilla Flores, Fiscal de Materia, se procedió a la aprehensión policial de Erick
Villca Monje en inmediaciones del Barrio “El Sol”, quien al verse sorprendido por efectivos
policiales trató de darse a la fuga en su motocicleta, tal como se tiene establecido en el informe de
13 de enero de 2012 (fs. 129 y vta.)

II.3. Se evidencia la declaración informativa prestada por Erick Villca Monje, en la cual se abstuvo
de declarar (fs. 141).

II.4. El 13 de enero de 2012, el Fiscal demandado, requirió al Juez de Instrucción Cautelar de


Riberalta, para que aplique medida cautelar de carácter personal contra el ahora accionante (fs. 145
a 146).

II.5. Por Auto de 14 de enero de 2012, el Juez de Instrucción Segundo en lo Civil y Familiar de la
localidad de Riberalta en suplencia legal, ordena la detención preventiva, en la carceleta pública de
esa localidad, del imputado Erick Villca Monje, librándose en el acto el correspondiente
mandamiento de detención preventiva en la misma fecha (fs. 150 y 151).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

El accionante estima vulnerados sus derechos a la vida, la libertad personal y la garantía de


presunción de inocencia, debido a que fue vejado, amenazado, privado de su libertad y detenido
ilegalmente, ante la inexistencia de mandamiento emanado por autoridad competente. En
consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad: finalidad y alcances

La acción de libertad es una de las acciones de defensa que contempla la Constitución Política del
Estado, instituida en el art. 125 de dicha norma, que tiene por finalidad garantizar la protección de
los derechos a la vida y a la libertad, cuando la persona considere que su vida está en peligro, que
es ilegalmente perseguida o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal.

La jurisprudencia desarrollada por el Tribunal Constitucional, estableció a través de la SC


0011/2010-R de 6 de abril, que: “La acción de libertad, es una acción jurisdiccional de defensa

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 35


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que tiene por finalidad proteger y/o restablecer el derecho a la libertad física o humana, y también
el derecho a la vida, si es que se halla en peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad
personal, sea disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento de las
formalidades legales y/o la remisión del caso al juez competente, la restitución del derecho a la
libertad física, o la protección de la vida misma, motivo por el cual se constituye en una acción
tutelar preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza como su
nombre lo indica, la libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE”.

En ese entendido, la Constitución Política del Estado “es más amplia en cuanto a su ámbito de
protección, pues se extiende al derecho a la vida, la libertad física o personal, el debido proceso,
en lo que se refiere al procesamiento indebido y la libertad de locomoción, esta última dada la
íntima relación que existe con el derecho a la libertad física, según la interpretación extensiva
realizada por la SC 0023/2010-R de 13 de abril” (SC 1211/2011-R de 13 de septiembre).

La acción de libertad, es una garantía constitucional, que se constituye en un instrumento de


defensa o de protección, contra las lesiones al derecho a la libertad; además, de ejecutarse a través
de un procedimiento constitucional sumarísimo, por lo que el constituyente otorgó a cualquier
persona este medio de defensa directo, sencillo, eficaz y oportuno, para restituir los derechos a la
libertad física o personal y de locomoción que hubieren sido vulnerados.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

La SC 0160/2005-R de 23 de febrero, en su Fundamento Jurídico III.1.2, con referencia a la


subsidiariedad excepcional del hábeas corpus -actualmente acción de libertad- desarrolló el
siguiente entendimiento jurisprudencial: “…como el ordenamiento jurídico no puede crear y
activar recursos simultáneos o alternativos con el mismo fin sin provocar disfunciones procesales
no queridas por el orden constitucional, se debe concluir que el proceso constitucional del hábeas
corpus, únicamente se activa cuando los medios de defensa existentes en el ordenamiento común,
no sean los idóneos para reparar, de manera urgente, pronta y eficaz, el derecho a libertad
ilegalmente restringido. No es posible acudir a este recurso, cuando el ordenamiento jurídico
prevé medios de impugnación específicos y aptos para restituir el derecho a la libertad, en forma
inmediata. Conforme a esto, solamente una vez agotado tal medio de defensa y ante la persistencia
de la lesión, se podrá acudir a la jurisdicción constitucional, invocando la tutela que brinda el
hábeas corpus”.

La SC 0181/2005-R de 3 de marzo con referencia al control de la investigación a cargo del juez de


instrucción, estableció que: “… todo imputado que considere que en el curso del proceso
investigativo ha sufrido una lesión de un derecho fundamental, entre ellos, el derecho a la libertad
en cualquiera de las formas en que pueda sufrir menoscabo, debe impugnar tal conducta ante el
juez instructor, que es el órgano jurisdiccional que tiene a su cargo el control de la investigación,
desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa preparatoria. Así, el Código de
procedimiento penal al prever la existencia de un órgano jurisdiccional competente para conocer
y resolver de manera directa y expedita, las supuestas vulneraciones a los derechos y garantías
que pudieran tener origen en los órganos encargados de la persecución penal; no resulta
compatible con el sistema de garantías previsto en el ordenamiento aludido, acudir directamente o
de manera simultánea a la justicia constitucional, intentando activar la garantía establecida por el
art. 18 constitucional, ignorando los canales normales establecidos. Consiguientemente, el hábeas
corpus sólo se activa en los casos en que la supuesta lesión no sea reparada por los órganos
competentes de la jurisdiccional ordinaria aludidos”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 36


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

A su vez, la SC 0008/2010-R de 6 de abril, señaló que: “I. El recurso de hábeas corpus, ahora
acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz para conocer y restituir cualquier tipo de lesión o
vulneración que pueda atentar al derecho a la vida, la libertad o constituir una persecución o
procesamiento indebido que atente o ponga en peligro el derecho a la libertad, cuando de
acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar de existir mecanismos de protección específicos
y establecidos por la ley procesal vigente, éstos resulten ser evidentemente inoportunos o
inconducentes, de manera tal que esta acción de defensa, por la urgencia de la situación, se
configura como el medio más eficaz para restituir los derechos afectados; empero, en caso de
existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos
para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser
utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad
operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse
agotado estas vías específicas.

II. Asimismo, cuando exista privación efectiva de libertad, por ser esta una causal grave, se
entenderá que la vía procesal existente no es idónea, cuando se pruebe que una vez activados estos
mecanismos procesales, su resolución y efectiva protección serán dilatadas, por ejemplo, por ser
irrazonables los plazos de resolución; por existir excesiva carga procesal para una rápida
decisión o ejecución de la decisión o por no cumplirse con los plazos para emisión de resoluciones
establecidos por la ley.

III. En el caso de vulneración al derecho a la vida, protegido por la acción de libertad, procederá
esta acción de forma directa y sin necesidad de agotar otra vía”. (Las negrillas y subrayados son
agregados)

En los casos, que en materia penal se impugnen actuaciones no judiciales -antes de la imputación
formal- a través de la acción de libertad, hay aspectos que se deben tener en cuenta, en los cuales
de manera excepcional, no es posible ingresar al fondo de la acción de libertad, a objeto de guardar
el equilibrio y complementariedad entre ambas jurisdicciones, es así que en la SC 0080/2010-R de
3 de mayo, en su primer supuesto, señaló: “Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía
como la Fiscalía cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de
locomoción, y todavía no existe aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas
ante el Juez Cautelar de turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad
procesal, es decir, con el aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad
jurisdiccional, es ante ella donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus
derechos. De no ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el
soberano a través del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez
constitucional en el control de la investigación”.

III.3. Juez cautelar encargado de ejercer el control jurisdiccional de la investigación

La SC 0054/2010-R de 27 de abril, estableció que:“… ante denuncia de irregularidades, actos


ilegales u omisiones presuntamente cometidas por los fiscales o policías en la etapa preparatoria
del proceso, que impliquen lesión a los derechos fundamentales de todo denunciado o sindicado,
la misma debe presentarse ante el juez cautelar como el encargado de ejercer el control
jurisdiccional de la investigación, en aplicación de lo dispuesto por las normas previstas en los
arts. 54.1) y 279 del CPP, sin que sea admisible acudir en forma directa a esta acción tutelar si
con carácter previo los hechos denunciados no fueron reclamados ante la autoridad encargada
del control jurisdiccional, que es la apta para restablecer las presuntas lesiones a derechos
fundamentales y -se reitera- sólo en caso de verificarse que existirá una dilación o que esa
instancia no se constituye en la eficaz y oportuna para restablecer esos derechos, es que se abre la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 37


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

posibilidad de acudir a la presente acción tutelar en forma directa”, (las negrillas y subrayado
fueron agregados), similar hecho fáctico fue resuelto por la SC 1067/2001-R de 4 de octubre.

III.4. Análisis del caso denunciado

El accionante, a través de la presente acción de libertad, denunció que se vulneró sus derechos a la
vida, la libertad personal y la garantía de presunción de inocencia, debido a que la autoridad fiscal
demandada conjuntamente a funcionarios policiales, procedieron a privarle de su libertad y
detenerlo ilegalmente, ante la inexistencia de mandamiento emanado de autoridad competente,
sufriendo vejación, tortura y amenazas.

Se evidencia que, dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra el accionante
por la supuesta comisión del delito de robo agravado y asociación delictuosa, en la audiencia de
medidas cautelares realizada el 14 de diciembre de 2011, en ningún momento éste presentó
incidente de actuación procesal defectuosa ni tampoco prueba alguna que sustente lo alegado con
referencia a sus derechos supuestamente vulnerados.

En este sentido, se tiene que el incidente de actividad procesal defectuosa, es un medio idóneo y
oportuno para restablecer cualquier irregularidad que exista en la investigación que vulnere
derechos y garantías constitucionales; por ello, el accionante debió tramitarlo conforme a
procedimiento, ante el Juez cautelar quien es el encargado de ejercer el control jurisdiccional, a
efectos de subsanar o resguardar las denuncias efectuadas en la presente acción de libertad y el no
hacerlo, como en el presente caso, sin duda no activa la justicia constitucional, por la existencia de
un medio de impugnación específico y apto para restituir los derechos alegados de vulnerados -
incidente de actividad procesal defectuosa- que por la subsidiariedad excepcional de la acción de
libertad, se exige su agotamiento previo.

Por el razonamiento desarrollado precedentemente, corresponde en revisión denegar la tutela, al no


ser posible analizar el fondo de la presente acción de libertad, por existir otro medio de defensa
idóneo e inmediato, para la protección del derecho a la libertad del accionante.

En consecuencia la Jueza de Garantías, al denegar la acción tutelar, ha actuado correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7
de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 38


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0005/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de Libertad
Expediente: 00027-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 01/2012 de 20 de enero, cursante de fs. 59 a 62, pronunciada dentro de la


acción de libertad interpuesta por Amalia Quispe Quispe en representación sin mandato de
Javier Layme Flores contra Rafael Alcón Aliaga, Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y
Liquidador de El Alto y Lilian Calderón Mariaca, Fiscal de Materia adscrita a la División
Menores, Trata y Tráfico de Seres Humanos.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La accionante mediante memorial presentado el 17 de enero de 2012, cursante de fs. 10 a 12,


refiere que su esposo se halla detenido preventivamente de manera ilegal desde el 18 de abril de
2011, habiendo transcurrido hasta la fecha de presentación de esta acción nueve meses y que en
ocho ocasiones solicito cesación a la detención preventiva de su representado en audiencias que no
fueron instaladas por motivos ajenos a la defensa y atribuibles a la denunciante, al Ministerio
Público, a la defensoría y a la ausencia del Juez de la causa, es decir, aun no se ha llevado a cabo la
audiencia de medidas cautelares.

Aduce que su representado presento un incidente de actividad procesal defectuosa, al amparo de


los arts. 167 y 169 del Código de Procedimiento Penal (CPP), toda vez que se inculpo a “Jaime
Laime Flores”, persona distinta a Javier Layme Flores y que en la imputación realizada por el
supuesto delito de Violación a Niño, Niña o Adolescencia existe error de tipicidad conformes
establece el art. 16 del Código Penal (CP), ya que con la prueba que acompaña demuestra que la
víctima al momento de la comisión del delito tenia 14 años de edad, por lo que se encuentra
indebidamente procesado

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

La accionante estima vulnerados los derechos de su representado a la libertad de locomoción, al


debido proceso, a la seguridad jurídica y a la presunción de inocencia, contenidos en los arts. 21.7,
109, 23 y 116 de la Constitución Política del Estado (CPE), 11 de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos, 7 y 8 de la Convención Americana sobre derechos Humanos.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 39


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicita que se declare “procedente” la acción de libertad y consecuentemente, se disponga la


inmediata libertad de su representado, así también se sancione con nulidad los actos realizados al
margen de la ley.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 20 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 57 a
58, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante ni su abogado, concurrieron a la audiencia de consideración de la acción de libertad


presentada, pese a su legal notificación (fs. 20 vta.).

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Por informe escrito cursante a fs. 21 y vta., Rafael Alcón Aliaga, Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal y Liquidador de El Alto, manifestó lo siguiente: El proceso penal al que hace referencia la
accionante, la etapa preparatoria ha culminado con una acusación formal contra Javier Layme
Flores. Por “Resolución 103/11 de 16 de abril de 2011, se ha dispuesto la detención preventiva de
Javier Layme Flores, por concurrir los requisitos previstos en el art. 233 del CPP y por ser
proporcional la medida solicitada con los hechos y riesgos procesales demostrados, y no como la
accionante sostiene, en sentido que existiría una detención ilegal”; carece de veracidad lo indicado
por la accionante en razón de que no se hubiera atendido las solicitudes del imputado, por cuanto
en las dos oportunidades en que pidió el cese de su detención preventiva, estas fueron rechazadas
mediante las Resoluciones 366”A”/2011 de 9 de septiembre y 08/2012 de 12 de enero.

Por otra parte Lilian Calderón Mariaca Fiscal de Materia -codemandada-se adhirió al informe del
Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, añadiendo que la accionante no mencionó qué normas
fundamentales y procesales fueron vulneradas, por otro lado infiere que en la audiencia conclusiva,
el abogado del imputado dio su conformidad para resolver la actividad procesal defectuosa y la
cesación de la detención preventiva, donde se resolvió los aspectos denunciados, afirmando que lo
único que hizo el abogado de la defensa fue “dar falsas esperanzas al detenido” por cuanto de la
lectura de la demanda se observo “un carnaval de peticiones contradictorias”, por lo que solicito se
rechace la presente acción de libertad.

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Partido y Sentencia de El Alto, por Resolución 01/2012 de 20 de enero,


cursante de fs. 59 a 62, denegó la tutela solicitada en base a los siguientes fundamentos: i) La
autoridad judicial demandada señaló que las solicitudes de señalamiento de audiencias de cesación
a la detención preventiva fueron suspendidas por negligencia del abogado defensor del detenido no
atribuibles al órgano jurisdiccional, por ende no se vulnero los derechos de locomoción del
detenido al debido proceso, a la seguridad jurídica, previsto en los arts. 21.7, 23 y 109 de la CPE;
ii) La autoridad demandada, invocando la SC 0619/2005 de 7 de junio , mediante Resolución
08/2012 de 12 de enero, en audiencia conclusiva, rechazo el incidente de actividad procesal
defectuosa y la solicitud de cesación de detención preventiva, aduciendo que los motivos que
fundaron la presente acción de libertad fueron resueltos en dicho acto, si bien la indicada
Resolución 08/2012, agravio los intereses del detenido, esta acción constitucional no es el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 40


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

mecanismo idóneo para reparar algún agravio de un fallo judicial que admite recurso ulterior; y, los
hechos denunciados por la parte accionante refieren en su contenido total a los actos procesales
realizados por el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto, y no así a algún
acto procesal de la Fiscal de Materia lo que hace inviable la tutela en su contra.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En vigencia de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se realizó el sorteo del presente
proceso el 15 de febrero de 2012, por lo que el pronunciamiento de la Sentencia se encuentra
dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan
seguidamente:

II.1. Dentro del proceso penal seguido a denuncia de Sandra Mariela Bautista Chambi contra
Javier Layme Flores -ahora representado de la accionante-, por la presunta comisión del delito de
violación agravada de niño, niña o adolescente previsto en el art. 308 BIS del CP, el Fiscal de
Materia emitió imputación formal en su contra, solicitando la aplicación de medidas cautelares
personales de detención preventiva (fs. 22 a 26), habiendo el dispuesto el Juez su detención
preventiva mediante Resolución 103/11 (fs.29 a 31).

II.2. Por memorial de 11 de noviembre de 2011(fs. 37 y vta.) el imputado solicita al Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto, fije día y hora de audiencia de cesación de
detención preventiva, sin embargo fue observado por decreto de 12 de noviembre del mismo año,
en sentido de que no se adjunto la “documentación idónea que respalde su solicitud” (fs. 37 y vta.)
pedido que fue reiterado el 17 de noviembre(fs. 40), habiendo la autoridad ahora demandada fijado
la audiencia para el 29 del mismo mes mediante decreto de 18 de noviembre (fs. 41).

II.3. En la fecha fijada para la audiencia de cesación de la detención preventiva (29 de noviembre
de 2011), el Secretario del Juzgado Cuarto de Instrucción en lo Penal mediante nota suspendió la
audiencia y dispuso que las partes soliciten nuevo día y hora de audiencia, con el argumento que el
Juez titular se encontraba de vacaciones y la Juez suplente tenia otras audiencias programadas y
actuaciones procesales a su cargo.

II.4. El Juez de Instrucción Mixto, Liquidador y cautelar de Corocoro de la provincia Pacajes en


suplencia legal del Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador de El Alto suspendió la
audiencia de cesación de detención preventiva, según consta en el acta de 14 de diciembre de 2011
con el argumento de que el imputado no se encontraba con su abogado defensor (fs. 48).

II.5. Por memorial presentado el 19 de diciembre de 2011 (fs.49), el imputado nuevamente solicitó
día y hora de audiencia de cesación de detención preventiva, habiendo el Juez señalado audiencia
conclusiva para el 29 de diciembre de 2011 (fs. 49 vta.), fecha en la cual la autoridad judicial
demandada nuevamente suspendió la audiencia y dispuso que las partes interesadas soliciten nuevo
día y hora de audiencia, aduciendo que no se presentaron las pruebas de cargo y descargo, además
de la inasistencia de la defensa técnica del imputado (fs. 50).

II.6. En la misma fecha el imputado solicitó nuevo día y hora de “incidente de cesación a la
detención preventiva” (fs. 51), audiencia que fue fijada para el 12 de enero de 2012 (fs. 51 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 41


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.7. Celebrada la audiencia pública de cesación a la detención preventiva de 12 de enero de 2012,


mediante Resolución 08/2012 de 12 de enero (fs. 54 a 55 vta.) el juez demandado rechazó los
incidentes de actividad procesal defectuosa así como el cese a la detención preventiva del
imputado. Esta resolución no fue apelada conforme lo dispuesto por el art. 403 de CPP.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante alega la vulneración de los derechos fundamentales y garantías constitucionales a la


libertad de locomoción, al debido proceso, a la seguridad jurídica y a la presunción de inocencia de
su representado, toda vez que: 1) No obstante de que en ocho oportunidades solicito la cesación a
la detención preventiva, el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y Liquidador demandado, no fijó
ni instaló la audiencia de consideración de cesación a la detención preventiva, por motivos ajenos a
su representado y mas bien atribuibles a la denunciante, Ministerio Público, Defensoría y a la
ausencia del Juez demandado quien gozaba de vacaciones, sin que hasta la fecha -de interposición
de la presente acción- se haya llevado la audiencia de medidas cautelares;2) El imputado presentó
un incidente de actividad procesal defectuosa por que se imputó a “Jaime Laime Flores”, persona
distinta a Javier Layme Flores y existía error de tipicidad en la calificación del hecho por cuanto la
imputación fue realizada por el supuesto delito de violación de niño, niña o adolescente conforme
establece el art. 16 del CP; sin embargo la victima tenia 14 años de edad al momento de la presunta
comisión del hecho delictivo denunciado. En consecuencia corresponde determinar en revisión, si
se concede o no la tutela solicitada.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

La acción de libertad ha sido instituida por el art. 125 de la CPE, que tiene por finalidad la
protección de los derechos a la vida y a la libertad, cuando la persona creyera estar ilegalmente
perseguida, indebidamente procesada o privada de su libertad o considere que su vida está en
peligro.

Esta norma constitucional es más amplia en cuanto a su ámbito de protección, pues se extiende al
derecho a la vida, la libertad física o personal, el debido proceso, en lo que se refiere al
procesamiento indebido y la libertad de locomoción, ésta última dada la íntima relación que
existe con el derecho a la libertad física.

Así la SC 0011/2010-R de 6 de abril, estableció que: “La acción de libertad, es una acción
jurisdiccional de defensa que tiene por finalidad proteger y/o restablecer el derecho a la libertad
física o humana, y también el derecho a la vida, …sea disponiendo el cese de la persecución
indebida, el restablecimiento de las formalidades legales y/o la remisión del caso al juez competente,
la restitución del derecho a la libertad física, o la protección de la vida misma, motivo por el cual se
constituye en una acción tutelar preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia
que garantiza como su nombre lo indica, la libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la
CPE”.

Sin embargo, en cuanto a los alcances de protección que brinda la actual acción de libertad la SC
0199/2010-R de 24 de mayo, reiterando lo previsto por la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, aclaró lo
siguiente: “No obstante, la naturaleza de esta acción tutelar, al constituirse en un mecanismo de
protección contra las lesiones al derecho a la libertad, y medio eficaz e inmediato reparador de ese
derecho; empero la existencia de esta garantía constitucional, no implica que todas las lesiones al
derecho a la libertad tengan que ser necesariamente reparadas de manera exclusiva y excluyente a
través del hábeas corpus, actualmente acción de libertad; pues no se trata de una garantía que
tenga la vocación de reparar, en exclusiva, todas las formas de lesión a la libertad que pudieran

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 42


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

invocarse, sino la de dotar a la persona de un medio de defensa sencillo, eficaz y oportuno, para
restablecer la lesión sufrida” (las negrillas nos corresponde).

III.2. Sobre el trámite de las solicitudes de cesación de detención preventiva al amparo del
art. 239 del CPP regidas por el principio de celeridad procesal

Conforme la uniforme línea jurisprudencial del Tribunal Constitucional, todas las solicitudes
vinculadas a la libertad personal y de locomoción tienen que tramitarse y regirse por el principio de
celeridad.

Así, la SC 0248/2002-R de 8 de marzo, citando jurisprudencia desde el año 2001, en un caso, en el


que el Juez demandado no resolvió la petición de cesación de detención preventiva en la audiencia
señalada para el efecto aduciendo ausencia del Ministerio Público, el Tribunal Constitucional,
concedió la tutela y dispuso que dicha autoridad judicial resuelva la cesación de detención
preventiva solicitada por los detenidos con la mayor celeridad, con los siguientes argumentos:
“… la uniforme jurisprudencia constitucional contenida en las Sentencias Constitucionales
792/2001-R y 1036/2001-R, entre otras, ha establecido que la petición de cesación de detención
preventiva debe ser resuelta de manera inmediata, ya que es una solicitud que está vinculada al
restablecimiento de un derecho fundamental como es el derecho a la libertad, que no puede ser
restringido ni suprimido en forma arbitraria; lo contrario significa prolongar indebidamente la
detención e incurrir en un procesamiento y detención indebidos.

Que esta línea jurisprudencial es aplicable al presente asunto, toda vez que el Juez recurrido
suspendió la audiencia señalada para resolver la cesación de detención preventiva, arguyendo la
ausencia de la autoridad fiscal, sin tomar en cuenta que ese acto procesal no podía ser
suspendido por ningún motivo y menos por ausencia de los sujetos procesales, dado que los
preceptos legales invocados no pueden de ninguna manera dilatar el procedimiento en cuestión, al
estar en juego el derecho a la libertad de los detenidos. Que con esa falta de pronunciamiento
oportuno, el juzgador demandado ha prolongado la privación de libertad de los representados de
la recurrente y los ha hecho objeto de una detención y procesamiento indebidos, en flagrante
violación del derecho a la libertad consagrado en el art. 6 de la Constitución Política del Estado, y
del art. 16 del mismo texto constitucional que resguarda el derecho a ser juzgado sin dilaciones
indebidas; derecho que guarda concordancia con el principio de celeridad procesal que debe
regir en todo proceso por disposición de los arts. 116-X de la Constitución Política del Estado y 8-
1 del Pacto de San José de Costa Rica. Que la circunstancia de que exista un señalamiento de
audiencia para el 31 de enero de 2002, de ninguna manera hace desaparecer la ilegal dilación
que ha sufrido la petición referida” (las negrillas nos pertenecen).

En ese mismo sentido, la SC 0078/2010-R de 3 de mayo fue complementada por la 0384/2011-12,


citando la SC 0224/2004-R de 16 de febrero, recogiendo y reiterando los fundamentos
constitucionales sobre la referida línea jurisprudencial, señaló que si bien no existe una norma
procesal penal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual deba realizarse la audiencia
que resuelva una medida cautelar vinculada al derecho a la libertad personal o al de locomoción,
sostuvo que dicha línea jurisprudencial se sustenta en la interpretación del valor dignidad y libertad
(art. 8.II de la CPE) con relación al deber de los jueces de observar el principio de celeridad
procesal (art. 180.I de la CPE), a cuyo efecto, desarrolló las siguientes sub reglas:

“Bajo la égida que el derecho a la libertad ocupa un lugar importante, junto a la dignidad humana
en el catálogo de derechos civiles como parte integrante a su vez de los derechos fundamentales,
tal cual lo establece el art. 22 de la CPE al señalar que: 'La dignidad y la libertad de la persona
son inviolables. Respetarlas y protegerlas es deber primordial del Estado', norma que debe ser

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 43


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

interpretada en base a los valores de la misma Constitución, la cual en el art. 8.II establece que el
Estado se sustenta en los valores de dignidad y libertad, entre muchos otros; se debe tener en
cuenta que la restricción o límite al derecho a la libertad física en materia penal, con carácter
provisional o cautelar, conforme a los requisitos constitucionales y legales, tienen naturaleza
instrumental y por ende modificable.

De acuerdo al sistema procesal penal vigente, plasmado en la Ley 1970 o Código de


Procedimiento Penal, el art. 239, establece los casos en que procede la cesación de la detención
preventiva, empero, el presente análisis no se aboca a los casos particulares, a ninguno de los
incisos del art. 239 del CPP, ni a los aspectos positivos o negativos, legales o doctrinales, o a su
interpretación o efectos, sino sólo y exclusivamente a aspectos generales como es la celeridad en
su trámite una vez efectuada la solicitud.

En ese sentido, es preciso puntualizar que la detención preventiva, no tiene por finalidad la
condena prematura, por cuanto la presunción de inocencia, sólo es desvirtuada ante un fallo
condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su imposición como medida precautoria está
sujeta a reglas, como también su cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no existe
una norma procesal legal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe realizarse
la audiencia de consideración, corresponde aplicar los valores y principios constitucionales,
previstos en el ya citado art. 8.II de la CPE, referido al valor libertad complementado por el art.
180.I de la misma norma constitucional, que establece que la jurisdicción ordinaria se fundamenta
en el principio procesal de celeridad entre otros; motivo por el cual toda autoridad jurisdiccional
que conozca una solicitud de un detenido o privado de libertad, debe tramitar la misma, con la
mayor celeridad posible, y dentro de los plazos legales si están fijados, y en un plazo razonable, si
no está establecido por ley. De no ser así, tal actuación procesal provocaría efectos dilatorios
sobre los derechos del detenido y en consecuencia repercute o afecta a su libertad que de hecho ya
está disminuida por la sola privación de libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento
implique que necesariamente se deba deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado
oportunamente a fin de que obtenga una respuesta positiva o negativa.
En consecuencia, se considera acto dilatorio en el trámite de la cesación de la detención
preventiva, cuando:

a) En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, se


dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por ley.

b) Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o prudencial. Plazo que
puede ser en un límite de tres o cinco días máximo, dependiendo de la particularidad de cada
caso, cuando por ejemplo existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan que ser
notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado acto previo y esencial -como
sucede con algunas notificaciones-, o que el juzgado esté de turno, etc. Con la excepción única y
exclusiva en los casos que exista complejidad por la naturaleza propia y la relevancia del proceso,
como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a la petición; situación que deberá
ser justificada por la autoridad judicial competente a momento de señalar la fecha de audiencia,
teniendo en cuenta la razonabilidad.

c) Se suspende la audiencia de consideración, por causas o motivos que no justifican la


suspensión, ni son causales de nulidad. Tal el caso de la inasistencia del representante del
Ministerio Público o de la víctima y/o querellante, si es que han sido notificadas legalmente y no
comparecen a la audiencia. En el caso del Ministerio Público al estar regido por el principio de
unidad tiene los medios para asistir a través de otro fiscal, y en cuanto al querellante al ser
coadyuvante y estar notificado, su participación es potestativa en dicho acto, y por ende, su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 44


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

inasistencia no vincula a la autoridad jurisdiccional al estar cumplida la formalidad. No obstante,


en caso de que la suspensión se deba a la falta de notificación o a la inasistencia del propio
imputado, no existe dilación indebida ni afectación a derecho alguno, en cuyo caso deberá fijarse
nueva fecha de audiencia conforme a las directrices expuestas”.

III.3. Análisis del caso

III.3.1. Respecto a la dilación en el señalamiento de audiencia de cesación a la detención


preventiva

En el caso de examen, se evidencia que dentro del proceso penal seguido contra el representado de
la accionante por la supuesta comisión del delito de violación agravada de niño, niña o adolescente
tipificado en el art. 308 BIS del CP, el imputado solicitó en varias oportunidades se fije día y hora
de audiencia para la consideración de la cesación de su detención preventiva; sin embargo, sus
solicitudes no fueron atendidas con la prontitud y diligencia debida ocasionando dilación en su
tramitación y consideración.

En efecto, las dilaciones injustificadas respecto de la tramitación de la cesación de detención


preventiva se pueden advertir que en las resoluciones y decisiones del Juez demandado, quien ante
la primera solicitud del imputado realizada el 11 de noviembre de 2011, en lugar de señalar día y
hora de audiencia observó la falta de documentación idónea. Posteriormente, pese a que el
imputado reiteró su petición el 17 de del mismo mes y año, fijó audiencia para el 29 de ese mes y
en la fecha fijada para su realización, ésta no se llevó a cabo suspendiéndose porque el Juez titular
se encontraba de vacaciones y la Juez suplente tenía otras audiencias programadas y actuaciones
procesales a su cargo, conforme señaló el Secretario del Juzgado Cuarto de Instrucción en lo Penal
y Liquidador de El Alto, mediante nota de 29 de noviembre del mismo año (fs. 43) quien además,
atribuyéndose funciones jurisdiccionales que no le competen suspendió la audiencia establecida
para esa fecha y dispuso que las partes soliciten nuevo día y hora para la realización de la misma.

Ulteriormente, el Juez de Instrucción Mixto, Liquidador y cautelar de Corocoro de la provincia


Pacajes, en suplencia legal del Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, también suspendió la
audiencia de cesación de detención preventiva, según consta en el acta de audiencia pública de
cesación a la detención preventiva de 14 de diciembre de 2011, con el argumento de que el
imputado no se encontraba con su abogado defensor (fs. 48).

No obstante a que el imputado nuevamente pidió día y hora de audiencia de cesación a su


detención preventiva, por memorial de 19 de diciembre de 2011 (fs. 49) el Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal y Liquidador señaló audiencia conclusiva, para el 29 del mismo mes y año
(fs. 49 vta.), fecha en la cual nuevamente suspendió la audiencia y dispuso que las partes
interesadas soliciten nuevo día y hora de audiencia, aduciendo el mismo argumento, esto es, que no
se presentaron las pruebas de cargo y de descargo y que no asistió la defensa técnica del imputado
(fs. 50); por lo que el mismo día el imputado instó nuevo día y hora de “incidentes de cesación a la
detención preventiva” (fs. 51), audiencia que se señaló para el 12 de enero de 2012 (fs. 51 vta.),
fecha en la que rechazó los incidentes de actividad procesal defectuosa así como el cese a la
detención preventiva del imputado.

De lo señalado se evidencia que el Juez demando en algunas oportunidades no fijó día y hora de
audiencia de consideración de la cesación de detención preventiva y en otras, suspendió
injustificadamente las mismas, sin tener en cuenta que no constituye justificación razonable dilatar
su trámite porque el imputado no adjuntó la prueba a tiempo de la solicitud, en razón a que ésta
puede ser aportada en la audiencia. De otro lado, tampoco constituye causal de suspensión de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 45


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

audiencia la inasistencia del abogado defensor del imputado, en razón a que la autoridad judicial,
precautelando el derecho a la defensa técnica del imputado, debió nombrar un defensor de oficio,
con mayor razón si la solicitud de cesación fue impetrada el 11 de noviembre de 2011.

III.3.2. Respecto de la resolución que resuelve la actividad procesal defectuosa

La parte accionante señala que presentó un incidente de actividad procesal defectuosa en mérito a que
se imputó a “Jaime Layme Flores” que es persona distinta a Javier Layme Flores y que existe un error
de tipicidad con relación a la calificación del delito y que su esposo estaría indebidamente procesado,
además que la acusación presentada por la autoridad fiscal lo realizó extemporáneamente.

El art. 167 del CPP, señala que “No podrán ser valorados para fundar una decisión judicial ni
utilizados como presupuestos de ella, los actos cumplidos con inobservancia de las formas y
condiciones previstas en la Constitución Política del Estado, Convenciones y Tratados Internacionales
vigentes y en este Código, salvo que el defecto pueda ser subsanado o convalidado”, es decir que
todos los actos que vulneren derechos o garantías constitucionales, o no se encuadren a los principios
procedimentales establecidos en las citadas leyes y fundamentalmente en el referido Código, simple y
llanamente serán nulos.

Según informa los antecedentes del proceso, se evidencia que la Resolución 08/2012 pronunciada por
la autoridad ahora demandada, rechazó el incidente planteado, toda vez que a criterio del juzgador
demandado las observaciones procesales realizadas por la defensa técnica y que fueron objeto del
incidente planteado se enmarcaron dentro de las normas procedimentales, y considerando el carácter
subsidiario de la presente acción, si la Resolución invocada vulneró alguno de sus derechos
fundamentales, previamente a acudir a la justicia constitucional, debieron agotar los recursos
establecidos en el Código de Procedimiento Penal, que de acuerdo a las SSCC 0636/2010-R y
1465/2011-R, han cambio de línea jurisprudencial el entendimiento desarrollado en la SC 0636/2010-
R de 19 de julio, indicando que el incidente de actividad procesal defectuosa es susceptible de
apelación incidental conforme establece el art. 403 del CPP, para que el tribunal de alzada, previa
verificación de alguna irregularidad o arbitrariedad que exista en la Resolución emitida por el Juez
ahora demandado, disponga su corrección, pero al no haberlo hecho, desconociendo los
mecanismos que franquea la propia ley, y al utilizar la presente acción como medio de defensa de
sus intereses, no cumplieron con la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad,
correspondiendo denegar la tutela.

Del derecho a impugnar incidentes de actividad procesal defectuosa en materia penal

El art. 394 del CPP, señala:“Las resoluciones judiciales serán recurribles en los casos expresamente
establecidos por este Código, el derecho a recurrir corresponderá a quien le sea expresamente
permitido por ley…”, artículo que es concordante con el art. 8 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos y en el art. 180.II CPE establece como una garantía el principio a la
impugnación en los procesos judiciales, así la SC 0636/2010-R, modificó la línea jurisprudencial
indicando que en los incidentes de actividad procesal defectuosa son apelables y debe interpretarse
bajo el marco del art. 403 inc. 2) del CPP, que constituye como resolución recurrible.

Asimismo, la SC 1465/2011-R de 10 de octubre, hace una diferenciación entre lo que es la


excepción y el incidente; conceptuando a la primera como un motivo jurídico que se utiliza para
defenderse u oponerse a la acción incoada; y, la segunda como aquella cuestión procesal vinculada
con el proceso principal, aunque independiente de él, pero cuya resolución es necesaria para
resolver.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 46


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.4. Falta de legitimación pasiva de la Fiscal de Materia codemandada

La SC 0691/2001-R de 9 de julio, entiende a la legitimación pasiva como “… la calidad que se


adquiere por la coincidencia que se da entre la autoridad que presuntamente causó la violación a
los derechos y aquélla contra quien se dirige la acción”; en el presente caso no se ha llegado a
establecer el vínculo causal que hubiera existido respecto a los presuntos derechos, garantías y
principios que fueron invocados por la accionante, razón por la que ésta autoridad carece de
legitimación pasiva para ser demandada en la presente acción ya que no especificó de que modo
con su accionar hubiera incidido sobre la libertad de su representado.

En consecuencia el Juez de garantías, al denegar la acción tutelar respecto del Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal de El Alto no ha actuado correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7
de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional en revisión resuelve:

1º CONCEDER la tutela impetrada, respecto al Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal de El Alto,


con relación a la dilación injustificada en la tramitación de la cesación de detención preventiva
incoada por el representado de la accionante, sin ingresar al análisis de la Resolución que
resolvió la cesación de detención preventiva.

2º APROBAR la Resolución 01/2012 de 20 de enero de 2012; respecto a la Fiscal de Materia


adscrita a la División Menores, Trata y Tráfico de Seres Humanos de El Alto.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0006/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00031-2012-01-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 004/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 28 vta. a 30 vta. pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Beimar Cuellar García contra Ponciano Ruiz
Quispe y Germán Miranda Guerrero, Vocales de la Sala Penal y Administrativa Coactiva
Fiscal y Tributaria del Tribunal Departamental de Justicia de Pando.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 47


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 6 de enero de 2012, cursante de fs. 11 a 14, el accionante expresa los
siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

El accionante sostiene que se encuentra detenido preventivamente en la cárcel de Villa Bush por
Auto Interlocutorio 175/2011 de 3 de septiembre, dispuesto por el Juez Segundo de Instrucción
cautelar, dentro del proceso penal que le sigue el Ministerio Público por el delito de robo
agravado, previsto en el art. 332 del Código Penal (CP), imputación realizada por el Fiscal de
Materia Einar Hurtado, mediante la cual, el Juez cautelar dispuso su detención preventiva, a
pesar de los reclamos y la falta de indicios en su contra; posteriormente, habiendo asumido
defensa, se hizo declarar al Capitán Celin Guari, quien manifestó y certificó que su persona se
encontraba en la policía en la fecha y la hora en que ocurrió el hecho, así como presentó
certificados de felicitaciones en su condición de policía, que recibió por parte de la Institución
Policial (por haber recuperado la medalla del Vicepresidente del Estado Plurinacional), por lo
que el Juez Primero de Instrucción cautelar, realizando una valoración de los nuevos elementos e
indicios presentados por Auto Interlocutorio 249/2011 de 14 de noviembre, le concedió la
cesación de la detención preventiva, por haberse desvirtuado la causal 1 del art. 233 del Código
de Procedimiento Penal (CPP).

Dicha decisión fue apelada por los representantes de la Gobernación del departamento de Pando
mediante memorial de 16 de noviembre del 2011, en el cual según el accionante, los apelantes
hacen referencia solamente a que los nuevos elementos presentados ya se encontraban insertos
hasta el momento de la detención preventiva abocándose solamente a describir los presupuestos
procesales de peligro de obstaculización sin relacionarlo con los elementos de convicción
conforme a lo exigido por el procedimiento y la sentencias constitucionales, haciendo referencia
además a la legalidad de la prueba olvidando el art. 171 del CPP (Libertad Probatoria), respecto
a los nuevos elementos e indicios presentados.

Continua refiriendo que, la apelación fue concedida y radicada en la Sala Penal el 26 de


noviembre de 2011, donde los Vocales demandados mediante Resolución de 2 de diciembre del
referido año, revocaron el Auto Interlocutorio que dispuso la cesación de la detención preventiva
con los siguientes fundamentos: 1) Los instrumentos cursantes en el cuaderno de apelación ya
fueron presentados y valorados, con la conclusión de que con los mismos documentos no se
puede pedir la cesación de la detención preventiva, porque no se estaría desvirtuando en
absoluto el peligro procesal de obstaculización; 2) Los certificados demuestran que es un buen
policía, pero no aportan en absoluto que estando libre podría destruir, modificar, suprimir
elementos de prueba; y, 3) La situación de otro imputado con medidas sustitutivas no se puede
aplicar a los otros imputados, por lo que la determinación del Juez cautelar fue errónea.

Con lo que según el accionante los mismos, al no referirse a los motivos que dispuso el Juez
cautelar para disponer la cesación de la detención preventiva en lo referente a haber desvirtuado
el primer requisito del art. 233.1 del CPP, y solo hacer referencia a los peligros procesales están
vulnerando su derecho a la libertad, motivo por el que se encuentra indebidamente privado de
libertad personal por la resolución arbitraria del Tribunal de Alzada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 48


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de sus derechos a la libertad y al debido proceso, citando al efecto los
arts. 23 y 115 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita que se le restituya su derecho a gozar de libertad bajo las medidas sustitutivas que se le
impongan.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 12 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 28
a 30 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó y amplió los fundamentos vertidos en su acción de libertad
contra los Vocales denunciados, indicando que el art. 116 de la CPE garantiza los derechos, por
ello solicita se conceda la tutela a su defendido, toda vez que las referidas autoridades dictaron
una Resolución que vulnera el derecho a la libertad del accionante, ya que al haber presentado
una solicitud de cesación a la detención preventiva acompañando prueba que acredita que su
defendido se encontraba en otro lugar en el momento del hecho delictivo, fue el motivo por el
cual el Juez cautelar aplicó medidas sustitutivas, siendo revocadas por los Vocales denunciados,
sin aplicar el art. 398 del CPP, ya que su Resolución debía basarse en la Resolución del Juez
cautelar.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El Vocal codemandado de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia


de Pando, Ponciano Ruiz Quispe, presentó informe escrito cursante a fs. 27, puntualizando: i)
Los litigantes y los colegas abogados habiendo agotado todos los recursos y acciones por no
tener argumentos válidos vienen planteando acciones de amparo y de libertad como en el
presente caso desnaturalizando la verdadera esencia de las mismas estando a punto de sustituir
las acciones ordinarias con las acciones constitucionales; ii) Dentro de la acción penal
interpuesta contra el accionante por supuesto robo agravado, el Tribunal de Alzada en audiencia
pública, procedió a analizar fríamente los datos del proceso, los fundamentos expuestos por las
partes, los peligros procesales aún latentes, en ese entendido, se dictó Resolución revocando el
Auto apelado, disponiendo la detención preventiva del accionante; iii) En la Resolución se
encuentran los fundamentos fácticos jurídicos y las razones por las que se revoca la Resolución
apelada; y, iv) El Tribunal de Alzada con la competencia establecida por el art. 398 del CPP,
resolvió en la manera y con los fundamentos expuestos el Auto de Vista de 2 de diciembre de
2011.

Germán Miranda Guerrero, Vocal codemandado, a pesar de haber sido citado legalmente, no se
hizo presente en la audiencia, como tampoco presentó informe.

I.2.3. Resolución

El Juez de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Pando, Hugo Michel Lescano,
constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 004/2012 de 12 de enero, cursante de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 49


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fs. 28 vta. a 30 vta., concediendo la tutela solicitada por el accionante sin determinar su libertad,
disponiendo que los Vocales demandados señalen día y hora para que en el plazo de tres días
dicten una nueva resolución con los siguientes fundamentos: a) De la revisión de la acción de
libertad interpuesta por Beimar Cuellar García contra los Vocales de la Sala Penal y
Administrativa del mismo Tribunal Departamental de Justicia, el abogado manifiesta que su
defendido fue beneficiado con medidas sustitutivas a la detención preventiva, por el Juez
Primero de Instrucción Penal y cautelar, debido a que este tomó en cuenta una certificación
emitida por el capitán Celin Guari Aparicio, Jefe de Seguridad del Comando Departamental de
Policía, la cual da fe que el accionante en la fecha y hora de sucedido el hecho se encontraba en
dicha institución, situación que generó duda en el Juez cautelar, que le motivó para que beneficie
con medidas sustitutivas a la detención preventiva al accionante; b) La decisión fue apelada por
los representantes de la Gobernación, sin tomar en cuenta la decisión del Juez cautelar,
basándose en que todavía existía el peligro de obstaculización, manifestando el abogado del
accionante que los Vocales demandados sin cumplir con los requisitos legales emitieron una
Resolución el 2 de diciembre de 2011, revocando las medidas sustitutivas a la detención
preventiva, impuestas por el Juez cautelar, misma que no se acomodaba al ordenamiento jurídico
y que no cumplía el art. 398 del CPP; c) Cuando el Tribunal de Alzada revoca una resolución de
un juez cautelar, la resolución debe tener no solo una adecuada fundamentación, sino también
debe hacer referencia a los presupuestos del art. 233 del CPP, en ese sentido si el Tribunal de
Alzada decide revocar las medidas sustitutivas a la detención preventiva, debe analizar los
supuestos previstos en el artículo referido, y así aplicar la medida extrema de detención
preventiva en una resolución debidamente fundamentada; d) Si se revoca una Resolución que
otorgó medidas sustitutivas a la detención preventiva, como sucede en el caso previsto, la
Resolución emitida por los Vocales de la Sala Penal y Administrativa, tiene que estar
debidamente motivada, por lo que en la resolución se deben indicar los motivos de su decisión y
se tiene que referir a los dos presupuestos del art. 233 del CPP; y, e) Por los argumentos
expuestos se ha comprobado que no existe una adecuada motivación en la Resolución de 2 de
diciembre de 2011, como lo exige el art. 124 del CPP concordante con el art. 398 de la misma
norma, la cual tampoco hace un análisis de los supuestos previstos en el art. 233 del CPP, por lo
que se establece que no se han seguido las formalidades para dictar una resolución
fundamentada.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Cursa Auto Interlocutorio 249/2011 de 14 de noviembre, por el cual el Juez Primero de
Instrucción en lo Penal y cautelar del Tribunal Departamental de Justicia de Pando, resuelve
conceder la cesación de la detención preventiva del imputado Beimar Cuellar García (fs. 4 y 5).

II.2. El recurso de apelación interpuesto por el Gobierno Autónomo Departamental de Pando,


apelando la Resolución 249/2011, solicitando la revocatoria del fallo mencionado, manteniendo
la detención preventiva del imputado.

II.3. El Juzgado Primero de Instrucción en lo Penal y cautelar, mediante decreto de 18 de


noviembre de 2011, remite los antecedentes a la Sala Penal y Administrativa (fs. 7 vta.).

II.4. Los Vocales de la Sala Penal, Administrativa, Coactiva Fiscal y Tributaria del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando, mediante Resolución de 2 de diciembre de 2011, revocaron
el Auto Interlocutorio 249/2011, disponiendo la detención preventiva del imputado mientras
dure la investigación con los siguientes fundamentos: 1) Los instrumentos cursantes en el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 50


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cuaderno de investigación ya fueron presentados, por lo que no se puede pedir la cesación de la


detención preventiva con los mismos; 2) Los certificados demuestran que es un buen policía,
pero no desvirtúan que estando libre podría destruir, modificar o suprimir elementos de prueba;
y, 3) La situación de otro imputado con medidas sustitutivas no se puede aplicar a los otros
imputados, por lo que la determinación del Juez cautelar fue errónea. (fs. 8 y 9).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que se encuentra detenido preventivamente por el delito de robo


agravado y en base a una valoración de nuevos elementos presentados por su persona, el Juez
Primero de Instrucción en lo Penal y cautelar le concedió la cesación de la detención preventiva,
pero dicha decisión fue apelada por los representantes del Gobierno Autónomo de Pando, misma
que fue concedida y radicada en la Sala Penal y Administrativa, donde los Vocales de la
mencionada Sala en base a los antecedentes remitidos revocaron el Auto 249/2011, que le
concedía la cesación de la detención preventiva, con lo que según el accionante, las autoridades
demandadas al no haber fundamentado ni motivado su Resolución están vulnerando su derecho
a la libertad y al debido proceso. En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales
argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


libertad, precisando: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad” (art. 125).

A su vez el art 23.I de la CPE, manifiesta que: Toda persona tiene derecho a la libertad personal
y a la seguridad personal. La libertad personal solo podrá ser restringida en los límites señalados
por la ley, para asegurar el descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las
instancias jurisdiccionales.

Siguiendo estos lineamientos establecidos por la misma Constitución, se puede desprender que
la acción de libertad, es un mecanismo de protección constitucional, tendiente a brindar la
defensa y protección correspondiente cuando el derecho a la libertad, se ve vulnerado, tanto en
lo que respecta a la libertad personal como el derecho a la vida, mostrando de esa manera su
esencia característica de ser una acción tutelar, tanto preventiva, correctiva y reparadora,
garantizando de esa forma el derecho a la libertad, y más aun cuando hay una interrelación
directa de esta con el derecho a la vida.

III.2. De la obligación del juzgador a fundamentar y motivar las resoluciones

Sobre este aspecto el Tribunal Constitucional determinó a través de la SC 1093/2011-R de 16 de


agosto que: Las resoluciones que resuelven una solicitud o reclamo, deben contener una
motivación coherente con el ordenamiento jurídico, exponiendo de forma clara y precisa los
fundamentos que llevaron a la autoridad a resolver el caso de una u otra forma, satisfaciendo
todos los aspectos demandados; caso contrario, se estaría vulnerando el derecho y garantía del
debido proceso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 51


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Cabe aclarar, no obstante, que no se puede exigir como fundamentación una argumentación
retórica intrascendente, sino más bien la adecuación de los hechos a la norma jurídica.

Asimismo la SC 00089/2010-R de 4 de mayo, en relación a la obligación de fundamentar la


resoluciones refiere que: En los casos en que un Tribunal de apelación decida revocar las
medidas sustitutivas y a la par disponer la aplicación de la detención preventiva de un
imputado, está obligado igualmente a dictar una resolución debidamente fundamentada sobre
la necesidad de aplicar dicha medida cautelar de carácter personal, explicando la concurrencia
de los dos requisitos determinados en el art. 233 del CPP. En ese sentido, se ha establecido que
el Tribunal de apelación, está obligado a motivar y fundamentar su resolución, precisando los
elementos de convicción que le permiten concluir en la necesidad de revocar las medidas
sustitutivas y aplicar la detención preventiva; a cuyo efecto, debe también justificar la
concurrencia de los presupuestos jurídicos exigidos por el art. 233 del CPP y una o varias de
las circunstancias señaladas por los arts. 234 y 235 del CPP, mediante una resolución
debidamente fundamentada, conforme exige el art. 236 del CPP, puesto que sólo cuando se
han fundamentado debidamente estas dos situaciones, se puede disponer la detención
preventiva.

Asimismo, la fundamentación de las resoluciones judiciales no sólo es exigible al momento de


imponer la detención preventiva, sino también cuando se rechaza la solicitud de cesación de la
detención preventiva, se dispone la sustitución o modificación de esa medida o, finalmente,
cuando se la revoca; aclarándose que la fundamentación se exige tanto en las resoluciones
pronunciadas en primera instancia, como aquellas emitidas en apelación y en toda decisión
judicial.

Ahora bien, por regla general, las resoluciones pronunciadas en apelación, en virtud a lo
establecido por el art. 398 del CPP, deben circunscribirse a los aspectos cuestionados en la
resolución. Sin embargo, esta limitación no significa que las autoridades judiciales, en
apelación, deban abstenerse de realizar el análisis sobre los supuestos previstos en el art. 233
del CPP, pues esa obligación les es exigible cuando tengan que revocar la resolución del
inferior que impuso medidas sustitutivas; es decir, los Vocales deben precisar los elementos de
convicción que les permitan concluir en la necesidad de revocar las medidas sustitutivas y
aplicar la detención preventiva, debiendo justificar la concurrencia de los presupuestos
jurídicos exigidos en el art. 233 del CPP” (las negrillas son nuestras).

III.3. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se infiere que, el accionante se


encuentra detenido preventivamente en la cárcel de Villa Bush, de la ciudad de Cobija, por el
supuesto delito de robo agravado, pero de acuerdo a nuevos elementos fue beneficiado con
medidas sustitutivas que fueron revocadas por los Vocales demandados.

De acuerdo al Auto Interlocutorio 249/2011, el Juez cautelar haciendo un análisis de la


documentación presentada por Beimar Cuellar García, realiza la valoración de una certificación
emitida el 11 de noviembre de 2011, por el Jefe de Seguridad del Comando Departamental de
Policía, la cual certifica que el accionante se encontraba de servicio en la Unidad Táctica
Operativa Policial, en la fecha de ocurrido el hecho delictivo (además de otros elementos como
ser memorándums y felicitaciones), dicha certificación según el Juez cautelar le genera duda
sobre el art 233.I del CPP, por lo que aplicando el principio penal que establece que en caso de
duda se debe aplicar lo más conveniente para el imputado, el Juez concede la cesación de la
detención preventiva aplicándole medidas sustitutivas; dicha resolución, es apelada por la parte

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 52


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

querellante, haciendo referencia al peligro de obstaculización, deduciendo posibilidades, sin


relacionarlos con elementos de convicción, al mencionar que el imputado en libertad podría
incurrir en las causales establecidas por el art. 235 del CPP, sin referirse específicamente al
punto en el cual se basó el Juez para aplicar las medidas sustitutivas, dicha apelación es elevada
a la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Pando, que en
calidad de Tribunal de Alzada revoca el Auto Interlocutorio mencionado mediante Resolución
de 2 de diciembre de 2011, disponiendo nuevamente la detención preventiva del accionante,
basando su fallo en el hecho de que los elementos presentados por el accionante no desvirtúan el
peligro procesal de obstaculización, respecto del accionante, obviando la certificación que existe
y que ha generado duda en el Juez cautelar para determinar su decisión, evidenciándose que el
Tribunal de Alzada, no ha fundamentado ni motivado adecuadamente su resolución a lo
dispuesto por el art. 124 de la CPP en concordancia con el art. 398 de la misma norma; es decir,
que los Vocales de la Sala Penal, Administrativa, Coactiva Fiscal y Tributaria, al haber revocado
el Auto Interlocutorio 249/2011, disponiendo la detención preventiva del imputado con los
fundamentos de que: a) Los instrumentos cursantes en el cuaderno de investigación ya fueron
presentados, por lo que no se puede pedir la cesación de la detención preventiva con los mismos;
b) Los certificados demuestran que es un buen policía, pero no desvirtúan que estando libre
podría destruir, modificar o suprimir elementos de prueba; y, c) La situación de otro imputado
con medidas sustitutivas no se puede aplicar a los otros imputados; sin embargo, de la lectura de
estos fundamentos se observa que las autoridades demandadas no han realizado una valoración
integral de los elementos de prueba, ya que con la afirmación de que el imputado estando en
libertad podría, modificar o suprimir elementos de prueba, la misma no puede generar en el
juzgador la seguridad objetiva de que el imputado en libertad pueda influir de manera negativa
en el curso del proceso, debiendo en todo caso existir los elementos de convicción suficientes
para sostener tal afirmación, que en el caso presente están ausentes, denotando susceptibilidad al
considerar sobre todo el peligro de obstaculización.

Como ya se tiene desarrollado en el Fundamento Jurídico III.2., el Tribunal de Apelación al


haber revocado las medidas sustitutivas del accionante y dispuesto su detención preventiva,
estaba obligado a dictar una resolución debidamente fundamentada y motivada, lo que no
acontece en el caso presente, concluyendo que los Vocales demandados no han cumplido con las
formalidades exigidas al momento de dictar la misma.

Por los fundamentos anotados, el Juez de garantías al conceder la tutela impetrada a través de la
presente acción de defensa, obró correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la
Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: CONCEDER la
tutela solicitada, en los términos dispuestos por el Juez de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 53


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0007/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00054-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 14/2012 de 26 de enero, cursante de fs. 32 vta. a 34, pronunciada


dentro de la acción de libertad, interpuesta por Julián Acebey Figueroa y Nadyne Mirtha
Acebey de Ortuño contra Frida Choque de Claros, Fiscal de Materia; Miguel Ronquillo
Chaina y Benjamín Laura Usnayo, funcionarios policiales.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Por memorial presentado el 20 de enero de 2012, cursante a fs. 5 y vta., los accionantes exponen
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

Fueron detenidos ilegalmente como si hubieran cometido delito en flagrancia, a consecuencia de


una confabulación promovida por su hermano y tío Modesto Acebey Figueroa, quien se
aprovechó de su condición de Notario de Fe Pública y de la profesión de sus hijos abogados.

A requerimiento de dos policías, los accionantes fueron conducidos a dependencias de la Fuerza


de Lucha Contra el Crimen (FELCC), supuestamente para suscribir garantías; sin embargo los
encerraron en celdas policiales, para luego prestar sus declaraciones informativas, a más de ello,
agregan que la Fiscal demandada, sin contar con mayores elementos de convicción y como si
tratara de un caso relevante, ordenó sus detenciones por un delito de bagatela, con la inminencia
de ser “llevados a medidas cautelares” (sic).

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes, estiman vulnerados sus derechos a la vida y a la libertad, sin citar norma
constitucional alguna.

I.1.3. Petitorio

Solicitan se guarde la tutela correspondiente y se restablezcan las formalidades legales.

I.2. Audiencia y resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública de consideración de la acción de libertad, el 26 de enero de 2012,


en presencia de la autoridad y funcionarios codemandados, además del representante del

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 54


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Ministerio Público, según consta en el acta cursante de fs. 30 a 31 vta., se produjeron los
siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante no asistió a la audiencia.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionarios demandados

Frida Choque de Claros, Fiscal de Materia, en audiencia señaló: a) El Ministerio Público recibió
el presente caso en acción directa, con la intervención policial preventiva en la que los
accionantes acudieron en calidad de arrestados, bajo el mando de Miguel Ronquillo Chaina y
Benjamín Laura Usnayo, policías que actuaron frente a una situación de flagrancia; b) En el
marco del art. 230 del Código de Procedimiento Penal (CPP) se determinó la aprehensión de los
accionantes; c) Se emitió un requerimiento fiscal y se obtuvo el certificado médico forense,
donde se indica que Modesto Acebey Figueroa tiene excoriaciones unguiales, aspecto que el
Ministerio Público tomó en cuenta además de otros antecedentes policiales; d) Se tomó las
declaraciones a los accionantes, con las formalidades que corresponde y en presencia de su
abogada; e) Se procedió a emitir la resolución de imputación analizada por el Juzgado Segundo
de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, el 21 de enero de
2012, instancia donde se determinó que los encausados se hagan presentes cada quince días ante
el despacho Fiscal, quedando prohibidos de acercarse al denunciante y contar cada uno con un
garante, otorgándoles setenta y dos horas para que puedan presentar estos requisitos; f) En
audiencia, la parte imputada y la denunciante plantearon apelación y posteriormente fueron
notificados con la resolución de recusación de la Jueza Segunda de Instrucción en lo Penal; y, g)
Estos aspectos fueron canalizados y formalizados en el registro y en el sistema IANUS, actuados
que adjunta en fotocopias simples, además del cuaderno de investigación con la finalidad de
corroborar la veracidad de estos documentos.

Los funcionarios policiales, en audiencia manifestaron: 1) Por instrucción de Radio Patrulla 110,
se constituyeron en la zona San Isidro, calle los Pinos 290, lugar en el que tuvieron contacto con
Modesto Acebey Figueroa, quien presentaba excoriaciones unguiales en la región de ambos
pómulos; y, 2) Procedieron como corresponde al arresto policial, y posteriormente remitieron a
los accionen a la FELCC.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, fungiendo como
Tribunal de Garantías, dictó la Resolución 14/2012 de 26 de enero, cursante de fs. 32 a 34, por
la cual denegó la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: i) El principio de
subsidiariedad establecido por las SSCC 0181/2005-R y 0189/2005-R, entre otras, determinan
que previamente a activar la justicia constitucional deben interponer otros recursos, siempre que
sean más apropiados, viables y sencillos; ii) Existe una autoridad jurisdiccional que controla la
investigación, por lo que los accionantes, deben acudir previamente a ésta para hacer prevalecer
sus derechos; en caso de no ser escuchados, recién se apertura la vía constitucional; iii) Al existir
una resolución de medidas cautelares, corrobora no sólo el control jurisdiccional por parte de un
juez de instrucción penal, sino también el hecho de no haberse agotado los recursos legales
ordinarios, que resultan “expeditivos”; iv) No se han cumplido con los presupuestos de los arts.
125 de la CPE y 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 55


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. Cursa en el expediente, Informe de Intervención Policial Preventiva Acción Directa, en el


hecho de amenazas de muerte y agresión física, de 20 de enero de 2012, denunciado por
Modesto Acebey Figueroa contra Julián Acebey Figueroa y Nadyne Acebey de Ortuño (fs. 3);
así también, el requerimiento fiscal de aprehensión de Nadyne Acebey de Ortuño, a fs. 3 vta. y
la complementación de requerimiento de aprehensión contra Julián Acebey Figueroa (fs. 4).

II.2. Imputación Formal de 21 de enero de 2012, presentada por Frida Choque de Claros, Fiscal
de Materia, directora funcional de la investigación seguida por Modesto Acebey Figueroa,
contra Nadyne Acebey de Ortuño y otro, por supuesta comisión del delito de lesiones graves y
leves y amenazas, (fs. 26 y vta.)

II.3. Resolución 45/2012 de 22 de enero; por la cual se rechaza la recusación planteada por
Modesto Acebey Figueroa en contra de la Juez Cautelar (fs. 27).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes, consideran que está en peligro su vida y que fueron privados de su libertad de
manera indebida, puesto que los funcionarios policiales demandados, les condujeron a
dependencias de la FELCC, supuestamente para suscribir garantías y una vez en el lugar, “les
meten a las celdas” (sic), prestan declaración y la Fiscal demandada ordena su detención por un
simple delito de bagatela, por el que serían llevados a audiencia de medidas cautelares. En
consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes, a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

El art. 125 de la CPE, señala que la acción de libertad tiene por objeto tutelar el derecho a la
vida y a la libertad, en los casos en que aquella se encuentre en peligro y cuando ésta sea objeto
de una persecución ilegal, un indebido procesamiento u objeto de privación en cualquiera de sus
formas, pudiendo toda persona que considere encontrarse en cualquiera de las situaciones antes
expresadas, acudir ante el juez o tribunal competente y solicitar se guarde tutela a su vida, cese
la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la
libertad; sin embargo, para que ésta opere, previamente se deben agotar todos los
mecanismos de protección específicos de defensa, es decir, antes de activar ésta acción
constitucional, se deben utilizar los medios y recursos que sean idóneos, eficientes y
oportunos; por lo que la acción de libertad solamente opera en caso de no haberse restituido los
derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas. Entendimiento asumido en
la SC 0008/2010-R de 6 de abril, donde se estableció que la acción de libertad es el medio
idóneo y eficaz para restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que atente al derecho a la
vida y a la libertad: “…empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de
defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la
persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los
afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no
haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas”
(las negrillas se agregaron).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 56


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En ese sentido y ampliando este criterio jurisprudencial la SC 0080/2010-R de 3 de mayo,


estableció tres aspectos que se deben tomar en cuenta, en los cuales de manera excepcional
no es posible ingresar al fondo de la problemática planteada, a objeto de guardar el
equilibrio y complementariedad entre la jurisdicción ordinaria y la Constitucional, siendo los
siguientes:

“Primer supuesto: Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía
cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y
todavía no existe aviso de inicio de investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez
Cautelar de turno. En los casos en que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir,
con el aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es
ante ella donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De
no ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a
través del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en
el control de la investigación.

Segundo Supuesto: Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una
resolución judicial de medida cautelar, por ende, que afecta al derecho a la libertad física o de
locomoción, con carácter previo a interponer la acción de libertad, se debe apelar la misma,
para que el superior en grado tenga la posibilidad de corregir la arbitrariedad denunciada.
Puesto que el orden legal penal ha previsto ese medio impugnativo, precisamente para que a
través de un recurso rápido, idóneo, efectivo y con la mayor celeridad se repare en el mismo
órgano judicial, las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen cometido en dicha fase o etapa
procesal. Lo propio si está referido a cuestiones lesivas a derechos fundamentales relacionadas
a actividad procesal defectuosa, o relacionada al debido proceso, casos en los cuales se debe
acudir ante la autoridad judicial que conoce la causa en ese momento procesal, puesto que el
debido proceso es impugnable a través de la acción de libertad sólo en los casos de indefensión
absoluta y manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o restricción a la
libertad física.

Tercer supuesto: Si impugnada la resolución la misma es confirmada en apelación; empero, en


lugar de activar inmediatamente la acción libertad, decide voluntariamente, realizar una nueva
petición ante la autoridad ordinaria, tendiente a un nuevo análisis y reconsideración de su
situación jurídica, sea mediante una solicitud de modificación, sustitución, cesación de
detención preventiva, etc., y la misma está en trámite, en esos casos, ya no es posible acudir a la
jurisdicción constitucional impugnando la primera o anterior resolución judicial, donde se
emitió el auto de vista, inclusive; por cuanto las partes de un proceso están impelidas de actuar
con lealtad procesal, de no ser así, se provocaría una duplicidad de resoluciones en ambas
jurisdicciones, e incidiría negativamente en el proceso penal de donde emerge la acción
tutelar” (las negrillas nos pertenecen).

III.2. Análisis del caso concreto

De la revisión de la problemática planteada, se tiene que los accionantes denuncian que las
autoridades demandadas hubiesen realizado diferentes actos procesales, mismos que originaron
su privación de libertad, vulnerando así sus derechos fundamentales.

Ahora bien, de la revisión de los antecedentes del caso y de la intervención de las partes en
audiencia, se establece que los extremos denunciados por los accionantes, cometidos por la
Fiscal y los funcionarios policiales, debieron haber sido denunciados ante la autoridad
jurisdiccional que ejercía el control de la investigación, puesto que con la presentación de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 57


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la imputación formal hecha contra éstos por el Ministerio Público, se tenía identificada a la
autoridad ante quien debieron acudir en procura de la reparación y/o protección de sus
derechos y garantías constitucionales, hecho que no ocurrió.

Así, los accionantes no podían acudir directamente a la acción de libertad activando la


jurisdicción constitucional, haciendo abstracción de los mecanismos legales efectivos de
protección que tenían a su alcance, conforme a ley, por lo que ahora no pueden pretender
suplir esa omisión a través de la presente acción constitucional, situación que determina en
ambos casos, la observancia de la jurisprudencia citada en el Fundamento Jurídico III.1. de esta
Sentencia, correspondiendo en consecuencia se deniegue la tutela solicitada, sin ingresar al
fondo.

III.2.1. Por otra parte, conforme a los derechos que tutela esta garantía constitucional -la libertad
y la vida-, así como por constituir un mecanismo de naturaleza extraordinaria y sumarísima para
la protección inmediata de tales derechos, ha sido la voluntad del constituyente y del legislador,
que la audiencia correspondiente a su consideración se realice sin mayores dilaciones en el plazo
de veinticuatro horas, sin posibilidad de postergarse por ningún motivo, proveyéndose incluso su
desarrollo en caso de no presentarse la autoridad o particular demandado; ese es el espíritu de
los arts. 126.I de la CPE y 68.1 de la LTCP, referidos a la regulación del trámite de la acción de
libertad.

En el caso que nos ocupa, la acción de libertad fue presentada el 20 de enero de 2012, misma
que fue recepcionada recién el 25 del mismo mes y año por el “Sistema Judicial Boliviano”,
inobservándose así los plazos de sustanciación establecidos por la Constitución y la Ley,
desnaturalizándose el carácter sumarísimo que tiene esa acción; situación que empero, no es
atribuible al Juez de garantías, sino a los encargados de la recepción de causas.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la acción tutelar, efectuó una adecuada


compulsa de los antecedente procesales y realizó un correcto análisis de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud a la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional, de conformidad con el art. 12.7 de la
LTCP, resuelve:

1º DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de fondo de la


problemática planteada.

2º Por Secretaría General ofíciese a la Presidencia del Tribunal Departamental de Justicia de La


Paz, para que -tratándose de acciones de defensa- los operadores del “Sistema Judicial
Boliviano” den estricto cumplimiento a los plazos establecidos en la Constitución Política del
Estado y la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, para la sustanciación de las mismas;
conforme a los términos expuestos en el Fundamento Jurídico III.2. de esta Sentencia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 58


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0008/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra. Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00030-2012-02-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución de 10 de enero 2012, pronunciada dentro de la acción de libertad


interpuesta por Lorena Azad Bucett contra Ponciano Ruiz Quispe y Germán Miranda Guerrero,
Vocales de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 9 de enero de 2012, cursante de fs. 7 a 8, la accionante expresa los
siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El Juez Segundo de Partido en lo Civil, en suplencia del Juzgado Único de Sentencia del Tribunal
Departamental de Justicia, como juez de garantías, en una acción de libertad anterior interpuesta por
la accionante, contra los Vocales de la Sala Penal y Administrativa mediante sentencia 10/2011 de 24
de diciembre, declaró procedente la referida acción de libertad. Empero, sin disponer la libertad de la
accionante, únicamente dejó sin efecto el último considerando de la Resolución de 13 de diciembre de
2011, pronunciada por las autoridades demandadas y dispuso que lo resuelvan de manera
fundamentada dentro del tercero día, cuyo plazo ha corrido desde el reinicio de las labores judiciales.

Sin embargo, las mencionadas autoridades no dieron cumplimiento a dicha resolución. Por tales
circunstancias, la accionante, afirma que continúa indebidamente privada de libertad.

Con dicho argumento, la accionante presenta nuevamente, acción de libertad contra los Vocales de la
Sala Penal y Administrativa, Ponciano Ruiz Quispe y Germán Miranda Guerrero, solicitando se dicte
sentencia y se restituya su derecho a la libertad.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

La accionante, sin citar norma legal alguna, denuncia la vulneración de su derecho a la libertad.

I.1.3. Petitorio

Tramitada la acción conforme lo establece el art. 126 de la Constitución Política del Estado, se
dicte sentencia que restituya su derecho a la libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 59


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 10 de enero de 2012, conforme consta en el acta cursante a fs.
9 y vta., produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante asistió a la audiencia y habiendo hecho uso de la palabra, su abogado fundamentó


los extremos de su demanda, indicando que en una primera instancia, la accionante interpuso
acción de libertad, que fue conocida por el Juez Segundo de Partido en lo Civil, mediante
Sentencia 10/2011, declaró procedente la acción y sin ordenar la libertad de la accionante, la
autoridad judicial dispuso, que las autoridades demandadas debían constituirse en audiencia,
para resolver de forma fundamentada la apelación al auto de cesación de la detención preventiva
presentada por la accionante. Determinación que no fue cumplida por los Vocales de la Sala
Penal y Administrativa, Ponciano Ruiz Quispe y Germán Miranda Guerrero.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

En audiencia, las autoridades demandadas, afirmaron que sí se dio cumplimiento a lo dispuesto


por el Juzgado Segundo de Partido en lo Civil, y por consiguiente solicitaron se rechace la
acción de libertad planteada.

Asimismo, estuvo presente en audiencia el representante del Ministerio Público, Juan Carlos
Cuellar Zurita, requirió se deniegue la tutela solicitada por la accionante, sin evidenciarse cuáles
son los fundamentos en los que efectúa su petición.

I.2.3. Resolución

El Juzgado de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Pando, constituido en Juez de


garantías, pronunció la Sentencia 002/2012 de 10 de enero, cursante de fs. 9 vta. a 11 vta.,
declarando denegada la tutela en la acción de libertad formulada contra los Vocales de la Sala
Penal y Administrativa, conteniendo dicho fallo los siguientes argumentos: 1) No se puede
presentar una acción de libertad para solicitar el cumplimiento de una resolución pronunciada en
otra acción de libertad anterior, ya que en caso de desobediencia e incumplimiento a las
resoluciones dictadas en acciones de libertad, se debe recurrir a la autoridad que conoció la
acción y que dio origen a la sentencia, no correspondiendo la interposición de otro recurso
extraordinario, 2) La amplia jurisprudencia constitucional ha dejado establecido que los recursos
constitucionales no son la vía o mecanismo idóneo para pedir el cumplimiento de las
resoluciones dictadas dentro de otras acciones de libertad. 3) Conforme lo señala la SC
0529/2011-R de 25 de abril, ante la eventualidad de un acto de resistencia, desobediencia o
incumplimiento de una Sentencia Constitucional, el accionante debe acudir ante el juez de
garantías, por ser ésta la autoridad llamada por ley, para hacer cumplir sus determinaciones.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establece


lo siguiente:

II.1. Resolución de 13 de diciembre de 2011, pronunciada por la Sala Penal y Administrativa del
Tribunal Departamental de Justicia de Pando, que declara improcedente el recurso de apelación

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 60


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

incidental planteado por Lorena Azad Bucett, y confirma totalmente el auto apelado que deniega la
cesación a la detención preventiva (fs. 4 a 5 vta).

II.2. Sentencia 10/2011 de 24 de diciembre, emitida por el Juez Segundo de Partido en lo Civil
en suplencia del Juzgado Único de Sentencia, resuelve la acción de libertad planteada por
Lorena Azad Bucett contra los Vocales de la Sala Penal y Administrativa Ponciano Ruiz Quispe
y Germán Miranda Guerrero, por haber vulnerado su derecho a la libertad. Resolución que
declara procedente la acción tutelar planteada por la accionante y sin ordenar su libertad,
dispone dejar sin efecto el último considerando de la resolución de 13 de diciembre emitida por
las autoridades ahora demandadas, a fin de que las mismas se constituyan en audiencia y
fundamenten la apelación al auto de cesación a la detención preventiva planteada por la
accionante (fs. 2 a 3 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante alega la vulneración de su derecho a la libertad, por cuanto las autoridades


demandadas, no dieron cumplimiento a la Resolución de otra acción de libertad, presentada por
la misma accionante. En consecuencia, corresponde analizar, en revisión, si tal argumento es
evidente a fin de conceder o denegar la tutela.

III.1. De las resoluciones incumplidas en acciones de libertad y amparo constitucional por


las autoridades demandadas.

En cuanto al incumplimiento de Resoluciones emitidas en acciones tutelares, existe una línea


jurisprudencial marcada. En este sentido la SC 0085/2011-R de 21 de febrero establece: “…las
acciones constitucionales no son la vía idónea para solicitar el cumplimiento de las
resoluciones dictadas dentro de las acciones de libertad y de amparo constitucional.” Así
también lo señala la SC 0129/2010-R de 10 de mayo: “… en los casos de desobediencia a las
resoluciones dictadas en recursos de habeas corpus, así como en los de amparo constitucional,
no corresponde la deducción de otro recurso extraordinario, sino que se debe acudir al tribunal
que conoció el recurso y que dio origen a la Sentencia, que será ante el cual se solicitará se
haga cumplir el fallo constitucional”.

Por lo que, cuando las autoridades accionadas no dan cumplimiento a lo dispuesto por el juez de
garantías, dentro de acciones de libertad o amparo constitucional, el accionante debe acudir ante
el mismo juez de garantías que emitió la resolución, o en su caso a la vía ordinaria para hacer
cumplir la misma; puesto que no corresponde presentar una nueva acción tutelar contra las
mismas autoridades ya demandadas en una acción tutelar anterior.

III.2. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

La accionante solicita tutela a su derecho a la libertad, porque las autoridades demandadas no


dieron cumplimiento a lo dispuesto por el tribunal de garantías. Resolución que fue elevada en
revisión ante el Tribunal Constitucional. Sin embargo; la mencionada accionante, sin aguardar el
respectivo pronunciamiento de este Tribunal Constitucional, interpone nueva acción de libertad
contra las mismas autoridades demandadas.

Del mismo modo, la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, en cuanto al


incumplimiento de las resoluciones emitidas, en acciones de libertad y amparo
constitucional, por las autoridades demandadas, señaló de manera reiterada que los
recursos constitucionales no son la vía adecuada para solicitar el cumplimiento de las

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 61


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

mismas. Es así que la SC 1326/2003-R de 12 de septiembre, señala: “…un eventual


incumplimiento de una Sentencia Constitucional emitida dentro de una acción tutelar (de
amparo o hábeas corpus), no puede resolverse a través de la interposición de otro recurso
constitucional. En efecto, al conocer y resolver casos análogos este Tribunal ha sostenido que
en los casos de desobediencia a las resoluciones dictadas en recursos de hábeas corpus, así
como en los de amparo constitucional, no corresponde la deducción de otro recurso
extraordinario, sino que se debe acudir al Tribunal que conoció el recurso y que dio origen a la
Sentencia, que será ante el cual se solicitará se haga cumplir el fallo constitucional y para el
caso de resistencia o incumplimiento, pedir la remisión de antecedentes al Ministerio Público
para el procesamiento penal de los demandados por la comisión del delito previsto en el art.
179-BIS del Código Penal (CP)”.

En el asunto de examen, resulta aplicable el razonamiento desarrollado en el fundamento


jurídico precedente. La accionante reclama que las autoridades demandadas no dieron
cumplimiento a lo dispuesto por el juez de garantías en una acción de libertad anterior
interpuesta por la misma accionante, y solicita la tutela de su derecho a la libertad, interponiendo
una nueva acción de libertad. Extremo que conforme a lo desarrollado líneas arriba no
corresponde conocer a esta jurisdicción constitucional.

Por lo que, el Juez de garantías al denegar la acción tutelar planteada por la accionante Lorena
Azad Bucett contra los Vocales de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de
Justicia de Pando, obró correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 002/2012 de
10 de enero, cursante de fs. 9 vta. a 11 vta., pronunciada por el Juez de Sentencia del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando; y, en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.- Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0009/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Dr. Efren Choque Capuma
Acción de libertad:
Expediente: 0007-2012-01-AL
Departamento: Beni

En revisión la Resolución de 4 de enero de 2012, cursante de fs. 121 a 122, pronunciada, dentro
de la acción de libertad, interpuesto por Rubén Montero Meza contra Jorge Fernández

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 62


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Zabalaga, Comandante de la Policía Provincial Amazónica de Riberalta, y, Edwin Padilla


Flores, Fiscal de Materia de Riberalta.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

El accionante, por escrito presentado el 3 de enero de 2012, cursante de fs. 114 a 115, manifestó
que:

I.1.1. Hechos que la motivan

En fecha 21 de diciembre de 2011, el accionante se encontraba de paso por la ciudad de


Riberalta, dirigiéndose a la ciudad de Cobija por cuestiones de trabajo, conduciendo, una
camioneta de propiedad de su hermano Luis Alberto Montero Meza, llegando a la localidad de
El Sena, escucharon disparos realizados por efectivos policiales del lugar, quienes obligaron a él
-y a sus acompañantes-, a echarse al piso para enmanillarlos sin señalar los motivos de su
aprehensión, tratándolos como delincuentes e indicando que en Riberalta, les explicarían todo.

En ese entendido, fueron arrestados en esa localidad a horas 17:00 hasta las 22:00, quedándose
en dependencias de la policía; una vez en Riberalta -al promediar las 3 de la mañana-, pasaron
toda la noche esposados, sin conocer el motivo de su arresto o aprehensión. A las 6 de la
mañana, el policía -de apellido Rossel- dijo que el día anterior hubo un asalto en la institución
Prendamas, y que tanto el accionante como sus acompañantes eran los principales sospechosos,
por lo que serán sometidos a un desfile identificativo; una vez en su celdas, sus abogados
manifestaron que las 2 señoritas que observaron el desfile identificativo, no los reconocieron
como autores o partícipes del hecho de robo a Prendamas. Procediendo recién a horas 23:00 a
otorgarles su libertad sin ningún tipo de citación, notificación, resolución o requerimiento en el
que se haya dispuesto alguna medida, por lo que tanto el accionante como sus acompañantes,
permanecieron detenidos por más de 32 horas desde el momento de su captura, sin prestar su
declaración informativa de ley, y al tiempo de dejarlos en libertad, les entregaron todas sus
pertenencias, menos su camioneta, que se encuentra con todos los papeles a nombre de su
hermano, bajo el pretexto que se quedaría en esas dependencias a efectos de investigación.

Por otro lado, extrañamente se citó a las dos señoritas para que el 3 de enero de 2012, se realice
otro desfile identificativo en el que el accionante como sus acompañantes tendrían que estar
presentes, sin conocer en qué calidad se encuentra, como sindicado, testigo o imputado; pero de
manera incoherente, se le citó como imputado pese a no habérsele tomado ni su declaración
informativa y menos aún sin que se le haya imputado, violando de este modo flagrantemente el
debido proceso y la presunción de inocencia, incurriendo en una persecución ilegal.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Señalaron como vulnerados los derechos y garantías a la libertad, al debido proceso y a la


presunción de inocencia, citando al efecto el art. 22 y 23 de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita que se le conceda la tutela y qué de manera inmediata cese la persecución indebida
llevada a cabo en su contra, asimismo, que se restituyan sus derechos y garantías lesionados.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 63


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 4 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 117
a 120, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la demanda

El abogado accionante, ratificó íntegramente los términos de la acción tutelar presentada.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Jorge Fernández Zabalaga, Comandante de la Policía Provincial Amazónica de Riberalta,


mediante informe escrito cursante a fs. 92, y ratificado en audiencia por el asesor legal de la
Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimne (FELCC), informó que el arresto del accionante se
puso a conocimiento del fiscal el 22 de diciembre de 2011, no estando detenido más de las 8
horas sin conocimiento de la autoridad fiscal. Por otro lado, no se puede sustituir los medios de
defensa ordinarios con la acción de libertad, ya que la CPE, manifiesta que la presente acción
está destinada a garantizar la libertad individual, por lo que el accionante al presentar su acción a
más de 12 días de su arresto, y en goce pleno de su derecho a la libertad, pretende obstaculizar o
neutralizar el accionar de la policía en la averiguación de la verdad de los hechos ilícitos, por lo
que al desaparecer el motivo que sirvió de fundamento para la presente acción, desaparece los
efectos del reclamo.

Del mismo modo, y ampliando la defensa del demandado, otra de los abogados señaló que su
defendido no tiene legitimación pasiva en la presente acción, reclamando cuestiones que no son
el fin de esta acción tutelar, puesto que demanda hechos relacionados a la camioneta en la que se
encontraba que aún no fue devuelta, pues para ese fin debe acudir a otros medios ordinarios
contemplados.

Edwin Padilla Flores, Fiscal de Materia de Riberalta, en audiencia manifestó que es falso que el
Ministerio Público no haya hecho conocer los hechos ocurridos dentro del plazo
correspondiente, ya que el 21 de diciembre de 2011, se puso en conocimiento de la autoridad
jurisdiccional, sobre el inicio de estas dando a conocer en el tiempo establecido a la FELCC,
para que dentro de sus atribuciones inicie las investigaciones del caso, de ese modo, el ahora
accionante, conoció sobre el desfile identificativo en el que iba a participar, existiendo el
requerimiento fiscal en original con el respectivo cargo de recepción, dejando claro que en
ningún momento se le trató como a detenido o imputado. Posteriormente, al no haber concluido
el desfile identificativo, se notificó al accionante el 26 de diciembre de 2011, para que se
presente a efecto de concluir dicho desfile; empero, sin fundamento alguno, no se hizo presente
al mismo, por lo que existe prueba clara que el acciónante se encuentra en goce pleno de su
libertad, y en ningún momento se le está persiguiendo o privando de su libertad, toda vez que el
Ministerio Público, simplemente está realizando una tarea investigativa. Haciendo referencia al
motorizado, este se encuentra retenido en dependencias de la policía, debido a que el mismo es
robado, de acuerdo a toda la documentación recaudada por Dirección de Prevención de Robo de
Vehículos (DIPROVE), por lo que tanto el Ministerio Público como DIPROVE no pueden hacer
la entrega del vehículo reportado como robado.

En ese entendido, de acuerdo a todos los fundamentos expuestos y al cuaderno de


investigaciones presentada en original, solicita la improcedencia de la acción.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 64


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez de Instrucción Cautelar de Riberalta, mediante Resolución de 4


de enero de 2012, cursante de fs. 121 a 122, denegó la tutela de la acción de libertad, con el
fundamento que el acciónate a través de la policía, conoció del inicio de investigación del hecho
delictivo, realizándose actos formales posteriores a la aprehensión, tales como el desfile
identificativo, las órdenes y citaciones cuyos datos se encuentran en el cuaderno de
investigaciones, por lo que las autoridades demandadas, no vulneraron ningún derecho ni
garantía del accionante, ni existe persecución indebida en su contra, toda vez que son las órdenes
y citaciones las que demuestran la existencia de un proceso en etapa de investigación.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes arrimados al expediente, se llega a las
conclusiones siguientes:

II.1. A fs. 19, cursa el informe de Acción Directa de oficio caso 309/2011 de 22 de diciembre,
presentada por el funcionario policial, por el cual, se consigna el arresto del acciónante y otras
tres personas con similares características que fueron proporcionadas por las víctimas de robo
agravado en la agencia Prendamas, quienes fueron trasladados a dependencias de la FELCC en
calidad de arrestados (fs. 22).

II.2. A fs. 25, cursa el informe de inicio de investigación de 22 de diciembre de 2011, emitido
por el Fiscal demandado, al Juez de Instrucción Cautelar de Riberalta.

II.3. A fs. 34 y 39, cursan las citaciones de 22 de diciembre de 2011 realizadas por el Fiscal al
ahora accionante, para que dentro del proceso investigativo por la presunta comisión del delito
de robo seguido en su contra, este se apersone al desfile identificativo de 22 y 26 del mismo mes
y año.

II.4. A fs. 109, cursa la citación de 29 de diciembre de 2011, realizada por el Fiscal para que el
accionante se presente al desfile identificativo de 6 de enero de 2012, dentro del proceso
investigativo por la presunta comisión del delito de robo seguido en su contra.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante manifestó que las autoridades demandadas lesionaron sus derechos y garantías a la
libertad, al debido proceso y a la presunción de inocencia, puesto que: 1) Fue aprehendido junto
a sus acompañantes de viaje en la localidad de El Sena, sin que se le explique el motivo de su
aprehensión, tratándole como a un verdadero delincuente, enmanillado y detenido por más de 32
horas; 2) No se le hizo conocer en qué calidad se encuentraba, es decir como sindicado, testigo o
imputado; de manera incoherente se le citó como imputado, sin que hasta ese momento se haya
puesto en su conocimiento la imputación de los supuestos delitos que hubieran cometido.
Correspondiendo analizar en revisión, si tales argumentos son evidentes y si constituyen actos
ilegales lesivos al derecho a la libertad del accionante, a fin de otorgar o denegar la tutela
solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y ámbito de protección de la acción de libertad

De acuerdo a la Jurisprudencia Constitucional, establecida en las SSCC 0040/2011-R de 7 de


febrero, 0100/2011-R de 21 de febrero, entre otras manifestó que: “…La garantía jurisdiccional

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 65


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del habeas corpus fue consagrada por el art. 18 de la CPEabrg, actualmente, la Constitución
Política del Estado vigente también la contempla pero con la denominación de acción de
libertad arts. 125 al 127 de la (CPE); sin embargo, no se trata de un simple cambio de
nomenclatura, sino de una precisión conceptual, pues conforme a la teoría del Derecho
Procesal Constitucional, sustituir la denominación de “recurso”, por la de “acción” -además
de adecuar la legislación boliviana a la evolución de la doctrina de la materia- implica
reconocer a esta garantía como “la facultad de demandar la protección de un derecho ante los
órganos jurisdiccionales” o sea “poner en marcha el aparato del Estado para la protección de
un derecho conculcado”, en contraposición a la denominación de “recurso” que implicaba
considerarla como la simple impugnación o reclamación que, concedida por ley, efectúa quien
se considera perjudicado o agraviado por la providencia de un juez o tribunal para que el
superior la reforme o revoque y que por ello supone la existencia previa de un litigio (García
Belaunde, Domingo. “El hábeas corpus en el Perú”. Universidad Mayor de San Marcos, 1979,
p. 108).

La precisión conceptual que implica el cambio de denominación, también conlleva que,


englobando el ámbito de protección y las características esenciales del hábeas corpus, la
acción de libertad adquiera una nueva dimensión; en ese sentido, se constituye en una garantía
jurisdiccional esencial, pues su ámbito de protección ahora incorpora al derecho a la vida -
bien jurídico primario y fuente de los demás derechos del ser humano- junto a la clásica
protección al derecho a la libertad física o personal, la garantía del debido proceso en los
supuestos en que exista vinculación directa con el derecho a la libertad física y absoluto estado
de indefensión (SC 1865/2004) y el derecho a la libertad de locomoción, cuando exista
vinculación de este derecho con la libertad física o personal, el derecho a la vida o a la salud
(SC 0023/2010-R).

Asimismo, la Constitución vigente mantiene las características esenciales del hábeas corpus: El
informalismo, por la ausencia de requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por la
urgencia en la protección de los derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite
caracterizado por su celeridad; la generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio,
inmunidad o prerrogativa, y la inmediación, porque se requiere que la autoridad judicial tenga
contacto con la persona privada de libertad.

Es importante resaltar que la Constitución Política del Estado vigente, en el marco más amplio
que implica la concepción de “acción de libertad” y acorde al principio de progresividad,
acentúa algunas de las características anotadas; así por ejemplo, en el caso del informalismo,
contempla la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, antes reservada sólo a
los supuestos en que la persona fuera menor de edad, incapacitada, analfabeta o notoriamente
pobre; en el caso de la inmediación, además de establecer que la autoridad judicial dispondrá
que el accionante sea conducido a su presencia, prevé la posibilidad de que ésta acuda al lugar
de detención; asimismo, como ya se ha referido, amplía el ámbito de protección, pues la ahora
acción de libertad no se limita a la protección de ese derecho, sino que alcanza al derecho a la
vida, además de la posibilidad de presentarla también contra particulares (art. 126 CPE).

De este modo, la jurisprudencia desarrollada por este Tribunal para el hábeas corpus, en tanto
y en cuanto no se contraponga a la Constitución Política del Estado es plenamente aplicable a
la acción de libertad…”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 66


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2. Sobre el carácter excepcionalmente subsidiario de la Acción de libertad

A través del desarrollo jurisprudencial, la acción de libertad, tiene carácter excepcionalmente


subsidiario,”...en los supuestos en que la norma procesal ordinaria de manera específica prevea
medios de defensa eficaces y oportunos para resguardar el derecho a la libertad supuestamente
lesionado…” (SC 0160/2005-R de 23 de febrero).

Por lo señalado, la acción de libertad, procederá de forma directa, sólo si los medios legales
ordinarios no son los adecuados e idóneos para reparar de forma inmediata y eficaz el derecho a
la libertad ilegalmente restringido.

Precisando dicho entendimiento, la SC 0008/2010-R de 6 de abril, ha establecido que la acción


de libertad, frente a otros mecanismos ineficaces hace que: “(…) se configure como un medio
de defensa idóneo para la protección efectiva y real de derechos fundamentales vinculados a la
vida, libertad y procesamientos indebidos que hagan peligrar, supriman o restrinjan estos
derechos (…)”.

Por lo que añade: “(…) en caso de existir norma expresa que prevea mecanismos intra-
procesales efectivos y oportunos de defensa de estos derechos fundamentales, deben ser
utilizados previamente antes de activarse la tutela constitucional, aspecto que se encuentra
enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la Declaración Universal de Derechos
Humanos y 25 de la Convención Americana de Derechos Humanos (…)”.

Bajo ese entendimiento, esta última Sentencia estableció subreglas para determinar la existencia
de medios efectivos y oportunos de defensa de los derechos que se encuentran bajo la protección
del recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, conforme al siguiente sentido; la acción
de libertad:

“I. El recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz para
conocer y restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a la
vida, la libertad o constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o ponga en
peligro el derecho a la libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar de
existir mecanismos de protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos
resulten ser evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de
defensa, por la urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir
los derechos afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de
defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la
persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los
afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no
haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas.

II. Asimismo, cuando exista privación efectiva de libertad, por ser esta una causal grave, se
entenderá que la vía procesal existente no es idónea, cuando se pruebe que una vez activados
estos mecanismos procesales, su resolución y efectiva protección serán dilatadas, por ejemplo,
por ser irrazonables los plazos de resolución; por existir excesiva carga procesal para una
rápida decisión o ejecución de la decisión o por no cumplirse con los plazos para la emisión de
resoluciones establecidos por la ley.

III. En el caso de vulneración al derecho a la vida, protegido por la acción de libertad,


procederá esta acción de forma directa y sin necesidad de agotar otra vía”. (Las negrillas
fueron añadidas).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 67


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.3. Análisis del caso concreto

En el caso de autos, no es posible ingresar al análisis de fondo de la presente acción tutelar,


puesto que por los antecedentes del caso, es evidente que al margen de existir órdenes y
citaciones emitidas por el Fiscal, a efecto de realizar a cabo el o los desfiles identificativos en el
proceso investigativo, el Juez Instructor en lo Penal, ya conocía de la investigación al igual que
el accionante conocía qué autoridad se encontraba a cargo del control jurisdiccional, en ese
entendido, tal como manifiesta el art. 54.1 del CPP, es el Juez de Instrucción quien dentro
de sus atribuciones y facultades, ejerce el control de la investigación y por tanto la
autoridad competente a quien el accionante debió acudir previamente a activar la justicia
constitucional.

En ese sentido, correspondía acudir a dicha autoridad, sobre cualquier lesión a los derechos
que el accionante ahora demanda, siendo esa la vía idónea, expedita y eficaz para el
restablecimiento de las supuestas infracciones a sus derechos y garantías constitucionales;
de tal manera que al no agotar previamente los medios y recursos que la justicia ordinaria
dispone para la reposición de los derechos y garantías supuestamente lesionados, no es
posible activar la justicia constitucional al no ser la presente acción tutelar, subsidiaria de
otros medios y recursos ordinarios.

En ese sentido, se concluye que el Juez de Instrucción Cautelar de Riberalta del Tribunal
Departamental de Judicial de Beni, al denegar la tutela de la acción de libertad, aunque con
otros fundamentos, ha evaluado correctamente los datos del proceso.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, de conformidad con el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP), en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 68


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

NOTA.-“El Tribunal Constitucional Plurinacional resolvió mediante Auto 0002/2012-ECA, ENMENDAR de


oficio el expediente 00018-2012-01-AAC, signado con el número de Sentencia Constitucional Plurinacional
0018/2012 de 16 de marzo, disponiendo que en definitiva le corresponda el número 0010/2012.”

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0018/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra.Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de Amparo Constitucional
Expediente: 00018-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 001/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 215 a 217; pronunciada dentro de
la acción de amparo constitucional interpuesta por Severo Carvajal Gutiérrez; Nicanor Subia
Llanos; Santiago Subia Llanos; René Subia Llanos; Braulio Subia Avendaño; Sandalio Tolaba
Ramírez; y, Dionicio Tolaba Ramírez contra Fatho Yamil Santiago Salame, Juez de Instrucción
Cautelar Mixto de Incahuasi Provincia Nor y Sud Cinti del Tribunal Departamental de Justicia
de Chuquisaca; y Daniel Tejerina, Oficial de Diligencias de dicho despacho.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de enero de 2012, cursante de fs. 197 a 202, los accionantes,
expresan los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal, seguido en contra de los ahora accionantes, por la presunta comisión del
delito de estelionato, que se habría cometido supuestamente cuando éstos eran directivos de la
Cooperativa Nuevo Amanecer.

Se señala que, luego de la audiencia conclusiva y encontrándose su abogada en Camargo, tuvieron


que trasladarse hasta el mencionado lugar para poder firmar su memorial de apelación; mismo que
fue entregado ante el Notario de Fe Pública de la localidad de Camargo, quien dio fe de lo actuado,
toda vez que el juzgado de Incahuasi se encontraba cerrado por ser fin de semana, y no existiendo
Notaría de Fe Pública en dicho lugar la misma, lo firmó y dio fe pública de la presentación de la
apelación antes referida. Una vez presentados los actuados ante el juzgado correspondiente; el juez
ahora accionado, emitió el Auto 40/2011 de 8 de noviembre, rechazando la apelación y obrado,
basándose en el Código de Procedimiento Civil, que conforme arguyen los accionantes, no es
aplicable a un proceso penal; indicando por su parte la autoridad demandada, que el Notario de Fe
Pública “no ha dado cumplimiento a los requisitos y formalidades”; señalando, que dicho Auto les fue
notificado mediante cédula en el mismo juzgado, debiendo ser de manera personal por ser una
Resolución de carácter definitivo conforme el art. 163.2 del Código de Procedimiento Penal (CPP).

Finalmente señalan que, el juez accionado emitió el Auto 40/2011, sin tener competencia para ello,
pues la Resolución emerge de la apelación que se efectuó sobre un fallo emitido, y no es de su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 69


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

competencia conocer apelaciones incidentales sobre sus propias resoluciones, debiendo limitarse a
remitir lo obrado ante el juez ad quem.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

Los accionantes denuncian la vulneración de sus derechos y garantía al debido proceso en sus
componentes de “derecho al juez natural”, competencia, independencia e imparcialidad, derecho
a la defensa, a un proceso sin dilaciones indebidas, a impugnar, a la “seguridad jurídica” y a la
petición, citando al efecto los arts. 14. I-II, 115.I, 119.II de la Constitución Política del Estado,
art. 8.1 del Pacto de San José de Costa Rica.

I.1.3. Petitorio

De la revisión de obrados, se establece que no existe un petitorio de manera expresa y clara (fs.
201 y 202).

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 17 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
218 a 220; produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

Los accionantes a través de su abogado se ratificaron en el contenido de su demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionario recurrido

El Juez de Instrucción Cautelar Mixto de Incahuasi, en audiencia, presentó informe verbal aduciendo
que el Auto 40/2011, no vulneró ningún derecho o garantía constitucional, más bien, “sanciona una
negligencia de la parte interesada”, por no acudir al juzgado, dado que las resoluciones se notifican en
el plazo de 24 horas. Además, la presentación de la apelación en la Notaría de Fe Pública de la
localidad de Camargo, incumplió el art. 97 del Código de Procedimiento Civil (CPC), pues en primer
lugar, se debió constatar la ausencia de la Actuaria del Juzgado de Instrucción o del Secretario de
Juzgado de Partido de Incahuasi, después de dicha diligencia, recién presentar la apelación ante el
Notario de Fe Pública, debiendo este funcionario, hacer constar esos extremos en la respectiva acta
notarial.

Por su parte, el Oficial de Diligencias del juzgado, informó de manera verbal que los accionantes,
tienen la obligación de apersonarse ante el juzgado para conocer de las diligencias del proceso; éstos
no lo hicieron y tampoco previeron los posibles gastos de traslado que ocasionaría la notificación del
referido Auto, tampoco llamaron a su celular, a pesar de tener su número, señala que “siempre lo
hacían”, pero no en la presente ocasión.

I.2.3. Resolución

El Juez de Partido Mixto y de Sentencia de Incahuasi, constituido en juez de garantías,


pronunció la Resolución 001/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 215 a 217, denegando la
tutela, bajo los siguientes argumentos: a) No se apeló el Auto 40/2011 de 8 de noviembre, que
invalida la actuación notarial que dispone como no presentadas las apelaciones incidentales,
conforme lo prevé el art. 403 del CPP; b) Tampoco fueron impugnadas oportunamente las
notificaciones efectuadas por el oficial de diligencias a través de una nulidad de notificación,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 70


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecido por el art. 166 del CPP, por consiguiente la presente causa no puede ser resuelta por
el carácter subsidiario de la acción de amparo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

II.1. Por oficio, el Notario de Fe Pública de la localidad de Camargo, Víctor Cruz Laura, señala:
“En la ciudad de Camargo, a las 17:00 del día 5 de noviembre de 2011 se hizo presente la Dra.
Natividad Pereira Huanca con un memorial dirigido al Juez de Instrucción de Incahuasi con
suma APELACIÓN INCIDENTAL” (sic) (fs. 7).

II.2. Por Auto 40/2011, la Juez de Instrucción Mixto y Cautelar de la localidad de Incahuasi,
determina: “…resulta invalido el cargo sentado por el Notario de Fe Pública (de Camargo) por
no acomodarse a las exigencias establecidas en el art. 97 del CPC” (fs. 9 vta.).

II.3. De fs. 10 a 196, se adjuntan en fotocopias simples partes del proceso penal seguido en
contra de los querellados, constituidos ahora como accionantes.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes para la presentación de un recurso de apelación incidental, acudieron, ante el


Notario de Fe Pública de la localidad de Camargo, toda vez que los juzgados de Incahuasi,
donde se tramitaba causa penal en contra de éstos, no se encontraban abiertos y también porque
en dicha localidad no existe Notario de Fe Pública. Presentada la apelación incidental ante el
Juzgado de Instrucción de Incahuasi, el titular del mencionado juzgado, mediante Auto, declaró
“invalida” la misma, con el argumento de que dichos actuados no se acomodaron a las
exigencias del art. 97 del CPC; provocando así la vulneración de los derechos y garantías de los
accionantes.

III.1. De los requisitos de admisión de la acción de amparo constitucional; la importancia


de un petitorio relacionado con la causa.

Se debe establecer que la petición, petitorio o petitum es entendido como el núcleo mismo de la
pretensión, es aquello que en justicia se busca satisfacer, es decir, se concibe como el objeto de
la pretensión que es aquello que se pide, o aquello que se quiere o pretende dentro de una
proceso, como en la presente acción de amparo constitucional, debiendo ser enunciada de
manera clara, concreta e indubitable, asimismo, observándose, en su caso, los presupuestos
procesales específicos.

La importancia del petitorio, de manera expresa y en términos directos y claros, debe


encontrarse directamente relaciona con los hechos de la causa, existiendo una relación entre
ambos, pues esta, determinará y delimitará la concesión del juez o tribunal de garantías en la
acción planteada, porque solamente puede conferir lo que se solicita, así, la SC 0381/2007-R de
10 de mayo señala: "…el Juez de tutela está obligado a conferir solamente lo que se le ha
pedido; esto muestra la enorme importancia que tiene el petitium de la causa, pues, el Juez está
vinculado a la misma; esto es, deberá conceder o negar el petitorio formulado…” (sic).
Por otra parte, se señala que la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTPC), en su art.
77, establece las exigencias del contenido de la acción de amparo constitucional, estableciéndose
que esta debe ser interpuesta mediante escrito, con los siguientes requisitos:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 71


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

1. Acreditar la personería del accionante.


2. Indicar el nombre y domicilio de la parte demandada, o de su representante legal y el de los
terceros interesados.
3. Exponer con claridad los hechos.
4. Identificar los derechos o garantías que se consideren vulnerados.
5. Acompañar la prueba en que funda su Acción o señalar el lugar en que se encuentra; en este
último caso la jueza, juez o tribunal, al momento de disponer la citación de la persona o
autoridad accionada, ordenará a quien corresponda presentar la prueba señalada, bajo
responsabilidad; y
6. Fijar con precisión la tutela que se solicita para restablecer los derechos o garantías
restringidos, suprimidos, amenazados o vulnerados. (Las negrillas son nuestras).

En el presente caso, el numeral 6 del referido artículo es el que nos interesa, pues expresamente
se determina que en la acción señalada se debe fijar con precisión la tutela que se solicita, ya que
sin este requisito, el Tribunal Constitucional Plurinacional, se ve imposibilitado de ingresar al
análisis del fondo del asunto, pues no se podría suponer cuál o cuáles son las pretensiones del
accionante.

Ante la inexistencia de este requisito fundamental, el Tribunal o juez de garantías, debió haber
observado el mismo, a fin de subsanarse antes de la admisión de la acción, o en su caso, haber
declarado el rechazo in limine de la misma.

III.2. Del caso concreto, la inexistencia de “petitorio” y sus efectos en la resolución de la


acción

Se establece que, en el memorial de la presente acción, no existe un petitorio expreso y claro,


evidenciándose que en el punto V.2 “Los derechos a recurrir y de petición” de la demanda, los
accionantes señalan los derechos y garantías supuestamente vulnerados de manera reiterada,
haciendo referencia entre otros, a los derechos que tienen las partes de recurrir: al debido
proceso; a la petición, etc., citando jurisprudencia constitucional; empero, a fs. 201 vta. y 202, se
evidencia una falta de conexión inteligible entre los hechos que motivan la acción, los derechos
y garantías reclamados y el petitum, mismo que no existe. Para el efecto, transcribiremos
literalmente la parte observada de la demanda: “Efectivamente, existiendo plazos establecidos
en el art. 405 del Código de Procedimiento Penal, para la tramitación del recurso de
apelación incidental y su remisión al Tribunal competente, el incumplimiento de los…
(final de la pág. 201 vta. y comienzo de la pág. 202)…la ejecución del Auto 40/2011 y se
paralice nuestro procesamiento ante el Tribunal de Sentencia de Camargo, juicio que se
halla ventilándose, en tanto se resuelva el presente recurso incluyendo su revisión, esto
para evitar se continúe consumando la amenaza de restricción o supresión del derecho o
garantía en que se funda nuestro recurso” (sic).

No pudiéndose deducir de lo transcrito, petitorio alguno por parte de los accionantes; se


evidencia a través del acta de la acción, que tampoco se efectuó un petitorio claro en la
audiencia correspondiente; toda vez que el abogado de los accionantes Elvis Luis Gareca,
ratificó el memorial de la acción, indicando lo siguiente: “Pidiendo (a) su autoridad que
declare el fallo, probando el mismo con condenación expresa tanto al juez recurrido y el
personal subalterno del Juzgado, paralelamente decrete se paralice el proceso irregular
que se tiene en el juzgado del tribunal de Sentencia precedida por su presidenta Norma
Chacolla, determine la responsabilidad de los recurridos, comunique sobre la resolución
que vaya a efectuarse al tercer interesado al Presidente del Tribunal de Justicia de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 72


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Chuquisaca, en uso de sus atribuciones debe estar inmiscuido, porque los recurridos han
vulnerado los derechos de los recurrentes…” (sic).

De lo antes anotado, no existe una conexión entre los hechos, los derechos supuestamente
vulnerados con el petitorio del memorial ni el petitorio de la audiencia celebrada.
Por lo que se denota la falta del requisito esencial de la existencia de un petitorio claro
relacionado con el proceso, hechos que imposibilitan a este Tribunal Constitucional
Plurinacional a ingresar al análisis del fondo del caso expuesto.
Por consiguiente, el Juez de garantías al denegar la acción de amparo constitucional, aunque
con otros argumentos, ha actuado de manera correcta.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de conformidad con el
art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional, resuelve: APROBAR la Resolución 001/2012 de 17
de enero, cursante de fs. 215 a 217, pronunciada por el Juez de Partido Mixto y Sentencia de
Incahuasi; y, DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de
fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0011/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00010-2012-01-AL
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 01/2012 de 13 de enero, cursante de fs. 102 a 103 y vta. pronunciada
dentro de la acción de libertad, interpuesta por José Luis Pillco Ríos contra Hugo Carrasco
Callejas, Fiscal de Materia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

I.1.1. Hechos que la motivan

Por memorial presentado el 12 de enero de 2012, cursante de fs. 3 a 4, el accionante manifiesta


que cuando se encontraba transitando por el parque Bolívar, en inmediaciones de la Fiscalía de
Distrito, un policía se le apersonó y sorprendió con un mandamiento de aprehensión emanado
del Fiscal ahora demandado, en el que se expresaba que su persona no fue a prestar una supuesta

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 73


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

declaración informativa. Pese a que argumentó que jamás fue notificado con “nada” y que no
conoce del proceso que se le sindica, además que tampoco se le comunicó quiénes son los
denunciantes y a qué título le denuncian, sin motivo alguno fue aprehendido y conducido ante la
Autoridad señalada, permaneciendo detenido en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el
Crimen (FELCC).

Finaliza afirmando que el Ministerio Público sólo tiene facultad para emitir mandamiento de
aprehensión conforme al art. 226 del Código de Procedimiento Penal (CPP); es decir,
cumpliendo ciertos requisitos, que no se observan en la Resolución de aprehensión de 8 de enero
de 2012, pues no se fundamenta por qué su presencia es necesaria, cuáles fueran los elementos
de convicción para sostener su autoría y si su persona quiso fugarse u obstaculizar la
averiguación del proceso, por lo que dicha Resolución es ilegal.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante, estima vulnerado su derecho a la libertad de locomoción, citando al efecto los


arts. 22 y 23.I y III de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes solicita se le conceda tutela ordenando su libertad inmediata.

I.2. Audiencia y resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública de 13 de enero de “2011” (sic), según consta en el acta cursante a
fs. 101 y vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó el tenor de la demanda y ampliando sus fundamentos, señaló
que presentó la acción de libertad porque la vida de su defendido corre peligro, al haber sido
golpeado y secuestrado, por lo que no es aplicable el tema de la subsidiariedad, según la SC
0008/2010-R de 6 de abril, pues fue golpeado y secuestrado, tiene moretes en todo el cuerpo.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Hugo Carrasco Callejas, Fiscal de Materia, en el informe escrito que cursa de fs. 11 a 12 vta.,
señaló: a) La actuación fiscal y policial dentro de un proceso investigativo criminal, se sujeta a
control jurisdiccional conforme al art. 279 del CPP, siendo -el juez- la autoridad idónea ante
quien reclamar las infracciones al debido proceso y al derecho a la libertad, por lo que el
impetrante, al acudir directamente a la jurisdicción constitucional sin observar el principio de
subsidiariedad, desconoció el rol, atribuciones y finalidad que el legislador dio al juez ordinario,
que se desempeña como “juez constitucional en el control de la investigación” cuya atribución
se encuentra en el art. 54.1 del mismo Código; y, b) Sobre el particular, existen innumerables
sentencias constitucionales, como la SC 1485/2011-R de 10 de octubre y otras que deben
asumirse por ser obligatorias y vinculantes, correspondiendo denegarse la tutela por
inobservancia del principio de subsidiariedad, disponiendo se acuda al juez cautelar, que en este
caso corresponde a la Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal “de Sucre” (sic).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 74


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituido


en Juez de garantías, dictó la Resolución 01/2012 de 13 de enero, cursante de fs. 102 a 103 vta.,
por la cual denegó la acción de libertad, con los siguientes fundamentos: i) Si bien el accionante
fue objeto de agresión física por parte de sus denunciantes, mereciendo un impedimento físico
de tres días, este hecho es anterior a la aprehensión dispuesta por el Fiscal, de ahí que el peligro
inminente contra su vida no tenga vinculación con las actuaciones investigativas, mucho menos
con la restricción de su libertad; ii) No se verificó ni acreditó que la eventual privación de
libertad hubiera agravado su salud o desmejorado su estado general poniendo en riesgo su vida;
al contrario, esta medida precautela su integridad física frente a posibles agresiones que podría
ser objeto de parte de los denunciantes; iii) El accionante, luego de ser aprehendido, no acudió
ante la autoridad jurisdiccional a efecto de regularizar su situación jurídica y reclamar eventuales
violaciones al debido proceso relacionadas con su estado de privación de libertad, máxime
cuando la presente acción de defensa se rige por el principio de subsidiariedad excepcional,
supuesto que en el caso de autos no fue observado; y, iv) Tampoco se acreditó el absoluto estado
de indefensión en el cual aparentemente se encontraría.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. El 8 de enero de 2012, Carmelo Chojllu Ramos y otros, formularon denuncia en contra de
José Luis Pillco (accionante), por la presunta comisión de los delitos de estafa y amenazas,
previstos y sancionados por los arts. 335 y 293 del Código Penal (CP) (fs. 22 a 28).

II.2. La misma fecha, la Fiscal de Materia, María Beth Vásquez Castro, requirió el inicio de la
investigación (fs. 21). Asimismo, informó al juez de instructor de turno en lo penal sobre el
inicio de la investigación (fs. 20); expidió citación al imputado para que preste declaración
informativa el 9 del mismo mes y año (fs. 29); y una segunda citación con el mismo objeto para
el 10 de enero de 2012 (fs. 30).

II.3. Hugo Carrasco Callejas, Fiscal de Materia en suplencia legal, ahora demandado, emitió la
Resolución de 10 de enero de 2012, por la que al amparo del art. 226 del CPP, dispuso la
aprehensión directa del accionante, aduciendo haber sido identificado como presunto autor de
los delitos denunciados y que dada la naturaleza de los hechos investigados, los efectos
económicos en personas de procedencia humilde y su conducta agresiva de amenazar de muerte
a algunas de las víctimas, constituyen peligro de obstaculización (fs. 35 a 36). El mandamiento
de aprehensión cursa a fs. 38.

II.4. El 12 de enero de 2012, el accionante prestó su declaración informativa ante el Fiscal de


Materia, Gonzalo Varnoux Serrano, en presencia de su abogado defensor (fs. 95 a 96).

II.5. De acuerdo al Certificado Médico Forense de 9 de enero de 2012, en esta fecha el


accionante habría sido objeto de agresión física que le ocasionó una incapacidad de tres días (fs.
13).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 75


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante, denuncia la vulneración de su derecho a la libertad de locomoción, aduciendo que


se encuentra detenido en virtud a un mandamiento de aprehensión emanado del Fiscal ahora
demandado, en razón a que no fue a prestar una supuesta declaración informativa, pese a que
jamás fue notificado con “nada”, no conoce del proceso, ni quiénes son los denunciantes, como
tampoco a qué titulo le denuncian; además, la Resolución que dispuso su aprehensión no cumple
los requisitos previstos en el art. 226 del CPP. En consecuencia, corresponde en revisión,
verificar si tales extremos son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

El art. 125 de la CPE, establece que la acción de libertad tiene por objeto tutelar los derechos a
la vida, a la libertad física y de locomoción, en los casos en que aquélla se encuentre en peligro y
cuando ésta sea objeto de persecución ilegal, indebido procesamiento u objeto de privación en
cualquiera de sus formas, pudiendo toda persona que considere encontrarse en tales situaciones,
acudir ante el juez o tribunal competente en materia penal y solicitar se guarde tutela a su vida,
cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a
la libertad.

Sin embargo, tratándose especialmente del derecho a la libertad, para que sea viable esta acción
de defensa, con carácter previo se deben agotar los mecanismos de defensa que tenga
expeditos el justiciable conforme al ordenamiento procesal común, haciendo uso de los
medios y recursos legales que sean idóneos, eficientes y oportunos para el restablecimiento
de este su derecho, de donde la acción de libertad operará solamente en los casos de no haberse
reparado efectivamente las lesiones invocadas pese a la utilización de estas vías. Entendimiento
asumido en la SC 0008/2010-R de 6 de abril, donde se estableció que la acción de libertad es el
medio idóneo y eficaz para restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que atente al derecho
a la libertad: “…empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de defensa que
sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o
procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los afectados; en estos
casos por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse restituido los
derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas” (negrillas agregadas).

En ese sentido, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, estableció tres supuestos en los cuales de


manera excepcional no es posible ingresar al fondo de la problemática planteada, con el
objeto de guardar un justo equilibrio y complementariedad entre la jurisdicción ordinaria y
jurisdicción Constitucional, siendo los siguientes:

“Primer supuesto: Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía
cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y
todavía no existe aviso de inicio de investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez
Cautelar de turno. En los casos en que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir,
con el aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es
ante ella donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De
no ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a
través del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en
el control de la investigación.

Segundo Supuesto: Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una
resolución judicial de medida cautelar, por ende, que afecta al derecho a la libertad física o de
locomoción, con carácter previo a interponer la acción de libertad, se debe apelar la misma,
para que el superior en grado tenga la posibilidad de corregir la arbitrariedad denunciada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 76


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Puesto que el orden legal penal ha previsto ese medio impugnativo, precisamente para que a
través de un recurso rápido, idóneo, efectivo y con la mayor celeridad se repare en el mismo
órgano judicial, las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen cometido en dicha fase o etapa
procesal. Lo propio si está referido a cuestiones lesivas a derechos fundamentales relacionadas
a actividad procesal defectuosa, o relacionada al debido proceso, casos en los cuales se debe
acudir ante la autoridad judicial que conoce la causa en ese momento procesal, puesto que el
debido proceso es impugnable a través de la acción de libertad sólo en los casos de indefensión
absoluta y manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o restricción a la
libertad física.

Tercer supuesto: Si impugnada la resolución la misma es confirmada en apelación; empero, en


lugar de activar inmediatamente la acción libertad, decide voluntariamente, realizar una nueva
petición ante la autoridad ordinaria, tendiente a un nuevo análisis y reconsideración de su
situación jurídica, sea mediante una solicitud de modificación, sustitución, cesación de
detención preventiva, etc., y la misma está en trámite, en esos casos, ya no es posible acudir a la
jurisdicción constitucional impugnando la primera o anterior resolución judicial, donde se
emitió el auto de vista, inclusive; por cuanto las partes de un proceso están impelidas de actuar
con lealtad procesal, de no ser así, se provocaría una duplicidad de resoluciones en ambas
jurisdicciones, e incidiría negativamente en el proceso penal de donde emerge la acción
tutelar” (las negrillas nos pertenecen).

III.2. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se establece que es de aplicación a la


problemática en revisión el primero de los supuestos antes señalados; por cuanto, si bien a
tiempo de plantearse esta acción aún no existía imputación formal en contra del
accionante, empero, la Fiscal asignada al caso dio aviso oportuno sobre el inicio de la
investigación al Juez cautelar, en estricta observancia de lo establecido en la última parte
del art. 289 del CPP; existiendo por lo tanto y desde ese momento, autoridad judicial
responsable del control de la investigación ante quien -en todo caso- correspondía
denunciar cualquier acto ilegal u omisión indebida en la que pudieron incurrir el Fiscal o
miembros de la Policía Nacional, quienes de conformidad con el art. 279 del CPP, actúan
siempre bajo control jurisdiccional; en ese entendido, dicha autoridad judicial estaba facultada
para adoptar las determinaciones que correspondieren en resguardo de los derechos del
imputado durante la fase de la investigación, por lo que al existir un medio de defensa
específico, idóneo, eficiente y oportuno para el restablecimiento del derecho a la libertad que el
accionante estima lesionado, corresponde aplicar la subsidiariedad excepcional de la acción
de libertad, lo que impide cualquier análisis de fondo respecto a los hechos que la
motivaron, cuya compulsa corresponderá al Juez cautelar, quien deberá adoptar las medidas
inmediatas y urgentes para revertir las arbitrariedades denunciadas por el accionante, derivadas
fundamentalmente de su falta de citación para prestar declaración informativa y su
desconocimiento de la denuncia y de los denunciantes; debiendo compulsar si se observó
estrictamente esta formalidad de carácter inexcusable y, en su defecto, al margen de rectificar el
procedimiento, aplicar las sanciones que correspondan, determinando inclusive responsabilidad
penal si se hubiere actuado maliciosamente al prescindir de la legal citación al imputado; por
cuanto, si bien por los fundamentos precedentemente anotados, en el caso presente resulta
imposible ingresar al análisis de fondo del asunto planteado, no es menos evidente que este
nuevo Tribunal Constitucional Plurinacional, para el fiel cumplimiento de los fines que le
asigna la Constitución Política del Estado, se ha propuesto mayor acción en el respeto y vigencia
de los derechos y garantías constitucionales, evitando toda arbitrariedad, como las derivadas de
la falta de citación o notificación al imputado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 77


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En cuanto a la invocación del derecho a la vida que hace el accionante en audiencia,


estimando que la misma corre peligro por haber sido golpeado y secuestrado por sus
denunciantes; de los mismos antecedentes se establece que el primer hecho alegado, habría
ocurrido con anterioridad al planteamiento de la presente acción, sin que por lo demás
representen un riesgo real e inminente para su vida; mientras que lo segundo, no ha sido
acreditado fehacientemente. No obstante, corresponderá igualmente al Juez cautelar
adoptar las medidas pertinentes para evitar la reiteración de tales actos, otorgando en todo
caso las garantías necesarias para que el accionante asuma su plena defensa, tomando en cuenta
lo establecido por el Tribunal Constitucional en la SC 0476/2011-R de 18 de abril, donde se
señaló lo siguiente: “…considerando el nuevo alcance de la acción de libertad que no sólo
protege el derecho a la libertad física o personal, sino también el derecho a la vida y el derecho
a la integridad física, para la protección de la persona contra la tortura u otros tratos o penas
crueles, inhumanas o degradantes -de acuerdo a la interpretación efectuada por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos en la Opinión Consultiva OC-8/87 de 30 de enero de
1987, citada en la SC 0044/2010-R de 20 de abril en cumplimiento de los principios de
legalidad, objetividad y responsabilidad del Ministerio Público (art. 225.II de la CPE); los fines
y funciones esenciales del Estado, entre ellas, garantizar la protección e igual dignidad de las
personas y el cumplimiento de los principios, valores, derechos y deberes reconocidos y
consagrados en la Constitución (art. 9.1) y 2), y las normas contenidas en el art. 299 del CPP
que señalan que el fiscal deberá controlar las condiciones físicas del imputado y el respeto
estricto de todos sus derechos, es preciso que los representantes del Ministerio Público dejen
constancia, en acta u otro documento (certificado médico forense), del estado físico en que
encontraron al imputado luego de su aprehensión -sea por particulares o funcionarios
policiales- para que se sigan las acciones correspondientes contra los presuntos autores de los
actos lesivos a la integridad física o personal del detenido o aprehendido.

Dicho documento deberá ser presentado de manera obligatoria al juez cautelar, quien como se
tiene señalado ampliamente, ejerce el control del respeto a los derechos y garantías del
imputado, y deberá ser solicitado al fiscal por el juez o tribunal de garantías cuando se
denuncien torturas o vejámenes -sin perjuicio de acudir al lugar de detención para verificar
las condiciones de la privación de libertad, conforme establece el art. 126.I de la CPE- con la
finalidad de que dicho Tribunal y, en revisión, este Tribunal Constitucional, pueda contar con
los elementos de prueba necesarios para pronunciarse sobre la supuesta lesión al derecho a la
integridad física o personal y la amenaza del derecho a la vida” (las negrillas son nuestras).

En consecuencia, el Juez de garantías -al denegar la acción- ha actuado correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de
conformidad con el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve:
DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración de que no se ingresó al análisis de fondo de la
problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 78


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0012/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra. Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00036-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 001/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 111 a 114, dentro de la acción de
libertad interpuesta por María Inés Rojas contra Elías Fernando Ganam Cortez, y Ricardo
López Guzmán, Presidentes de la Sala Penal Segunda y Tercera respectivamente del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Por memorial presentado el 19 de enero de 2012, a horas 17:50, cursante de fs. 4 a 6 vta., la
accionante expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

El Juez Tercero de Sentencia y la Sala Penal Segunda, del Tribunal Departamental de Justicia de La
Paz, incumpliendo los principios procesales de certidumbre jurídica, debido proceso, igualdad y
derecho a la defensa, determinaron rechazar su solicitud de cesación a la detención preventiva en base
a su propia opinión personal y sin la fundamentación necesaria que merece el mismo.

Agrega, que el Juez Tercero de Sentencia, no valoró las SSCC 0880/2007-R y 0128/2011, que
fueron ofrecidas en calidad de prueba; asimismo, cometió una contradicción tanto en la
Resolución como en la complementación emitida; toda vez que el mismo Juez, al reconocer que
existía una omisión y la falta de valoración de la jurisprudencia constitucional presentada,
cometiendo una contradicción, determinó por mantener el rechazo de la cesación de la detención
preventiva; a su turno, los Vocales de la Sala Penal Segunda, ratificaron la Resolución emitida
por el adquo señalando que aún concurrían los riesgos procesales establecidos en los arts. 234.
10 y 235. 2 del Código de Procedimiento Penal (CPP), agravando más aún su situación de
imputada, al señalar el Presidente de dicha Sala, que los delitos de Ley 1008 son de lesa
humanidad, sin aclarar, cuál era la base legal para calificar al delito en cuestión como lesa
humanidad, mencionando únicamente que fue calificado como tal por una “jurisprudencia de la
Corte Superior de La Paz”; arguye además que, la falta de fundamentación y la de valoración de
la prueba, la dejan en completa incertidumbre e indefensión respecto a las razones de hecho y de
derecho para determinar el rechazo de la detención preventiva.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 79


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante denuncia la vulneración de sus derechos a la libertad de locomoción, al debido


proceso, legalidad, presunción de inocencia y a la favorabilidad, citando al efecto los arts. 22,
23, 115, 116, 117, 120, 179 y 180 de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se revoque el Auto de Vista 05/2012 de 16 de enero pronunciada por la Sala Penal
Segunda y la Resolución 09/11 de 23 de noviembre de 2011, dictada por el Juez Tercero de
Sentencia, consecuentemente se ordene que las mencionadas autoridades emitan una resolución
fundamentada donde se valore la jurisprudencia constitucional señalada, se determine en forma
jurídica y técnica, cuál la base para establecer que los delitos de la Ley 1008 son de lesa
humanidad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 25 de enero de 2012, a horas 15:00, según consta en el acta
cursante de fs. 108 a 110, produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante, en audiencia, asistida de su abogado ratificó los fundamentos de su demanda.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

A través de los informes escritos cursantes a fs. 48 y 55 Ricardo Chumacero Tórrez por Elías
Fernando Ganam Cortez y Elías Fernando Ganam por Ramiro López Guzmán argumentaron lo
siguiente: a) El proceso seguido por el Ministerio Público contra María Inés Rojas por el delito
de tráfico de sustancias controladas, radicó en la Sala Penal Segunda producto de una apelación
y conforme a procedimiento se señaló audiencia pública para considerar la apelación respectiva;
y, b) La accionante habría señalado que el Presidente de la Sala Penal Segunda habría
considerado en la Resolución 05/2012 que los delitos de la Ley 1008 son de lesa humanidad,
agravando la situación jurídica de la imputada, al respecto, refiere que se ratifican en las
consideraciones contempladas en la Resolución señalada.

I.2.3. Resolución

La Jueza Quinta de Sentencia en suplencia legal de su similar Cuarto, ambos del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz, constituida en Jueza de garantías, pronunció la Resolución
001/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 111 a 114, “deniega la tutela” en la acción de libertad
formulada contra los Vocales de la Sala Penal Segunda como demandados. Conteniendo el fallo
dictado los siguientes argumentos: 1) No corresponde efectuar el análisis de la Resolución
09/2011 emitida por el Juez Tercero de Sentencia, porque esta autoridad no ha sido accionada,
pese haberse manifestado que dicha autoridad habría incurrido en contradicciones y omisiones,
más aún si se ha mencionado que no ha hecho mención a jurisprudencia constitucional,
conforme habrían señalado los Vocales accionados; 2) El análisis se realiza fundamentalmente
en la Resolución 05/2012 que emitieron los Vocales accionados, ya que se indicó que éstos no
fundamentaron su decisión; sin embargo, de la lectura de la misma se puede establecer que está
debidamente fundamentada y que en la misma no existiría la supuesta contradicción en la que
habrían ingresado el juez aquo, porque en complementación y enmienda no es posible modificar

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 80


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la parte dispositiva de la Resolución emitida en lo principal tal cual establece el art. 125 del
CPP, cuando señala que cualquier alteración no puede importar una modificación esencial en la
resolución principal; 3) Los Vocales accionados hicieron mención que el Juez aquo habría
valorado la jurisprudencia constitucional de manera integral, por lo que se refirió a los aspectos
reclamados por la accionante en consecuencia la Resolución 05/2012 se habría pronunciado en
apego a las disposiciones que rigen la materia penal y entre ellas el Código de Procedimiento
Penal, por lo que no vulneraron los derechos y garantías constitucionales de la accionante; 4)
Los delitos de narcotráfico al ser considerados como de lesa humanidad, no es cosecha de los
vocales accionados, sino que existe jurisprudencia emitida por el Tribunal Supremo de Justicia
de la Nación y entre ellas el Auto Supremo 26 de 9 de enero de 2008 refrendado por leyes
especiales incluso de carácter internacional, por lo que el Auto de Vista pronunciado por las
autoridades recurridas se halla fundamentado; y, 5) Finalmente, la solicitud de cesación a la
detención preventiva no es definitiva ni causa estado y que éstas pueden ser revocables o
modificables aún de oficio y planteadas en cualquier momento para su consideración.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documentación que se adjunta al expediente, se evidencia que:

II.1. Mediante memorial de 12 de noviembre de 2011 de fs. 90 a 91 María Inés Rojas, solicita
cesación de su detención preventiva por concurrir uno de los requisitos establecidos en el art.
239 inc.1 del CPP.

II.2. El Juez Tercero de Sentencia, en audiencia de 23 de noviembre de 2011 emitió la


Resolución 09/2011 (fs. 99 a 102), por el que rechaza la solicitud de cesación a la detención
preventiva solicitada por María Inés Rojas, por no haberse desvirtuado las causales de los arts.
234. 10, 235. 2 y 239 del CPP, contra la resolución emitida la ahora accionante presenta recurso
de apelación que fue radicada ante la Sala Penal Segunda.

II.3. La Sala Penal Segunda, constituida por los accionados, dictó la Resolución 05/2012 de 16
de enero de fs. 105 a 107, por la que confirma la resolución 09/2011 dictada por el Juez Tercero
de Sentencia, argumentando que en la Resolución señalada no existe contradicción a las que
hace referencia el abogado de la ahora accionante, toda vez, que en una complementación y
enmienda solicitada no se puede desvirtuar las consideraciones de la presencia de riegos
procesales que hubiera establecido el juzgador al momento de dictar la resolución, que el juez ha
hecho una valoración integral de todos los elementos presentados así como de las sentencias
constitucionales que hace mención, por lo mismo, ha valorado correctamente los elementos y ha
dado cumplimiento a lo previsto y dispuesto por el art. 124 del CPP.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante sostiene que las autoridades judiciales demandadas lesionaron su derecho a la libertad,
al debido proceso, a la legalidad, a la presunción de inocencia “y a la favorabilidad”, por cuanto
aprobaron la resolución que rechazó su solicitud de cesación de la detención preventiva, a través de
una resolución que carece de fundamentación y en la que no se valoraron las pruebas presentadas.- En
consecuencia, corresponde analizar, en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Sobre la valoración de la prueba por parte de los jueces y tribunales que ejercen el
control jurisdiccional de la investigación en causas penales

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 81


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La valoración de la prueba en la solicitud de cesación de detención preventiva, es atribución


privativa del juez o tribunal que ejerce el control jurisdiccional de la investigación o del que está
en conocimiento de la causa, es así que dentro de una acción de libertad, sólo puede procederse a
una valoración de la prueba, cuando el juzgador se aparte de la previsiones legales que rigen el
acto procesal como de los marcos de razonabilidad y equidad previsibles para decidir, caso
contrario, no puede intervenir para dejar sin efecto la resolución que conceda la cesación o la
que rechace, ya que ello importaría una doble valoración de la prueba, en este sentido la SC
0222/2010-R de 31 de mayo, ha recogido lo establecido por la SC 0965/2006-R de 2 de octubre,
donde establece que deben darse determinadas condiciones para que este Tribunal entre a
valorar la prueba, como ser las siguientes: “…Cuando en dicha valoración: a) exista
apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad previsibles para decidir. b)
Cuando se haya omitido arbitrariamente valorar la prueba y su lógica consecuencia sea la
lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales”.

III.2. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

La accionante solicita cesación a la detención preventiva por concurrir el requisito establecido


en el art. 239 inc.1) del CPP; el Juez Tercero de Sentencia por Resolución 09/2011 rechazo la
solicitud de cesación a la detención preventiva por no haberse desvirtuado las causales de los
arts. 234.10, 235.2 y 239 del CPP, resolución que fue confirmada por los Vocales de la Sala
Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, con el argumento que, en la
resolución señalada no existe contradicciones a las que hace referencia el abogado de la
accionante, toda vez que en una complementación y enmienda no se puede desvirtuar las
consideraciones de la presencia de riesgos procesales que hubiere advertido el juzgador al
momento de dictar la resolución; señala que el Juez ha hecho una valoración integral de todos
los elementos presentados así como de las Sentencias Constitucionales que fueron ofrecidas en
su oportunidad como prueba y ha dado cumplimiento a lo previsto y dispuesto por el art. 124 del
CPP.

De lo anotado, se concluye que los Vocales demandados de la Sala Penal Segunda resolvieron
en forma fundamentada la apelación emergente de la solicitud de cesación a la detención
preventiva presentada por la ahora accionante, habiéndose efectuado una valoración de las
pruebas mencionadas con la facultad privativa que les concede la ley, sin que a criterio de
este tribunal haya existido un apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y
equidad previsibles para deducir lo contrario, o se haya omitido arbitrariamente el valor
de las pruebas presentadas, cuya consecuencia haya derivado en la vulneración de los
derechos de la accionante; que permita a este Tribunal Constitucional Plurinacional, valorar
tales hechos, por lo que resulta evidente que no existe violación alguna a los derechos de la
imputada, motivo por el cual no puede concederse la tutela solicitada mediante esta acción.

Por los fundamentos expuestos, el Juez de garantías al denegar la acción de libertad, obró
correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional Sala Primera Especializada, en virtud de la


autoridad que le confiere el Art. 202.6 de la Constitución Política del Estado, y el art. 12.7 de la Ley
del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve: APROBAR la Resolución
001/2012 de 25 de enero de 2012, cursante a fs. 111 a 114, pronunciada por la Juez del Juzgado
Quinto de Sentencia en lo Penal en suplencia del Juzgado Cuarto de Sentencia en lo Penal del

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 82


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Tribunal Departamental de Justicia de La Paz y, en consecuencia; DENEGAR la tutela


solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0013/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00048-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión, la Resolución 001/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 10 vta. a 12 pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Abraham Quiroga Bonilla en representación
sin mandato de Gustavo Salazar Núñez contra Fernando Orellana Medina, Juez Tercero
de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de enero de 2012, cursante de fs. 1 a 2 vta., el accionante por su
representado refiere lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Que, su representado se encuentra recluido en el Centro de Rehabilitación de Santa Cruz


(Palmasola), emergente del sumario investigativo seguido por el Ministerio Público, por la
presunta comisión del delito de homicidio y lesiones graves y gravísimas en accidente de
tránsito; a tal efecto, conforme a la norma procesal penal, solicitó audiencia de cesación a su
detención preventiva, que debía celebrarse el 4 de enero de 2012, sin embargo, la misma fue
suspendida al encontrarse el Juzgado sin secretario; es así que el 6 de enero de 2012 solicitó
nueva audiencia, la cual hasta la fecha de presentación de esta acción de libertad no fue
providenciada, perjudicando plenamente a su representado, originando que se encuentre
indebidamente recluido y sobre todo que pierda su trabajo y familia por la denuncia e
investigación de un hecho que jamás cometió, encontrándose su memorial en despacho del Juez
del Centro Integrado del Plan Tres Mil por más de dos semanas, ocasionando su ilegal
detención, al no realizar el señalamiento de audiencia conforme señala el Código de
Procedimiento Penal y Sentencias Constitucionales.

Por lo expuesto, y siendo que los derechos a la libertad y locomoción de su representado, se


encuentran quebrantados al no señalarse audiencia de cesación a la detención preventiva, sin
existir fundamento jurídico válido para la negativa de su petitorio, atentando no solamente

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 83


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

contra sus derechos sino contra los preceptos constitucionales, violando el respaldo a la
seguridad y libertad; en tal motivo, al imperio de lo establecido por el art. 125 de la Constitución
Política del Estado Plurinacional (CPE); y, art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), interpone acción de libertad.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración del derecho a la libertad y de locomoción de su representado,


sin citar norma constitucional alguna.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare procedente la acción y se ordene la celebración y señalamiento de audiencia


dentro de las 24 horas, reivindicando de esta manera los derechos y garantías constitucionales
expuestas.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 12 de enero de 2012, según consta en el acta que cursa de fs. 9
a 10, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante por su representado ratificó in extenso su acción.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, en audiencia informó lo siguiente: a) Que, conoció el


cuaderno procesal ante la renuncia de los jueces del Plan Tres Mil; además desde el 26 de
diciembre hasta el 8 de enero los Juzgados Primero y Segundo de Instrucción en lo Penal, ante
una licencia justificada que concedió la Corte Superior; b) El deber de los jueces, es cumplir con
los plazos establecidos en la ley, pero la responsabilidad en los juzgados en suplencia no es
como la del titular, quizá por eso es que desatienden sus funciones, para cumplir la de los
juzgados en suplencia dando cabida a todas las solicitudes que realizan, lastimosamente estuvo
atendiendo cuatro juzgados, lo que le impidió cumplir sus funciones a cabalidad, tomando en
cuenta que a los jueces en suplencia no les corre término; c) Que, en honor a la verdad conoció
el expediente el 28 de diciembre y fue por eso que solicitó a la secretaria del Juzgado que haga
las actas; d) Considera que no es prudente la presente acción de libertad, porque existe una
Resolución que establece la detención preventiva, existiendo un mandamiento de detención
preventiva librado por el Juez de Instrucción Mixto del Plan Tres Mil y que las acciones
posteriores que se pudieran realizar en cuanto a la cesación de la detención por la mejoría de la
situación jurídica no importa una demanda de acción de libertad porque el accionante no se
encuentra indebidamente detenido o indebidamente procesado, situación que deberá ser resuelta
dentro los plazos procesales que establece la norma; y e) Finalmente reitera que existe una
recarga laboral por la falta de atención de las personas encargadas de resolver los problemas de
vacancia en el área penal; porque si en el Plan Tres Mil existen dos juzgados sin jueces, en la
capital si mal no recuerda son cinco, de ahí que atienden siete jueces los problemas de catorce
juzgados.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 84


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Resolución

El Juez Tercero de Sentencia en lo Penal, constituido en Juez de garantías, pronunció


Resolución de fs. 10 vta. a 12, denegando la acción de libertad, fundando su Resolución en lo
siguiente: 1) Que, mediante memorial de fecha 5 de enero de 2012, Gustavo Salazar Núñez
solicitó audiencia de cesación a la detención preventiva al Juez Tercero de Sentencia en lo
Penal, en suplencia legal del Juzgado Primero de Instrucción; 2) Que, dicho memorial fue
providenciado, el 9 de enero de 2012, señalando audiencia de cesación para el día 16 del mismo
mes y año a horas 10:00 a.m.; 3) En el presente caso se alega que el Juez demandado, hasta la
presentación de la acción de libertad no “habría dado oídos” a la petición de cesación a la
detención preventiva formulada por el imputado; sin embargo de antecedentes se tiene que, el
Juez Tercero de Instrucción se encuentra en suplencia legal del Juzgado Primero de Instrucción
en lo Penal del Plan Tres Mil, también en suplencia de los Juzgados Primero y Segundo de
Instrucción en lo Penal de la Capital y que revisado el cuaderno procesal se tiene que el Juez
mediante decreto de 9 de los corrientes señaló audiencia para considerar la solicitud del
accionante, por lo que la solicitud ha sido atendida por esta autoridad, señalando audiencia para
el 16 de enero de 2012 a horas 10:00 a.m.; tomando en cuenta la carga laboral del Juez Tercero
de Instrucción, concluye que la audiencia fue atendida dentro el plazo razonable, considerando
que los días 7 y 8 de enero no fueron laborables, consecuentemente el Juez demandado al haber
procedido en la forma descrita no cometió acto ilegal.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. De acuerdo a lo expresado por el accionante, y lo manifestado en audiencia por el Juez de


garantías, al no cursar prueba alguna en el cuaderno procesal; se tiene establecido que el 27 de
diciembre de 2011 debió celebrarse audiencia de cesación a la detención preventiva del
imputado Gustavo Salazar Núñez, la que hubiere sido suspendida porque no se encontraba el
representante del Ministerio Público (fs. 9).

II.2. Posteriormente, por memorial de 5 de enero de 2012, el imputado solicitó al Juez ahora
demandado, nueva audiencia; misma que fue señalada mediante proveído de 9 de enero de 2012
para el 16 de enero del año en curso (fs. 9 vta.).

II.3. Según cargo de presentación cursante a fs. 2 vta., se establece que la acción de libertad fue
presentada en fecha 11 de enero de 2012.

II.4. De la Resolución del Tribunal de garantías cursante de fs. 10 vta. a 12, se establece que el
Juez, fue notificado para ejercer suplencia del Juzgado Primero de Instrucción en lo Penal el 5
de enero de 2012 y que también ejerce suplencia de los Juzgados Primero y Segundo de
Instrucción en lo Penal.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante por su representado señala que la autoridad demandada, vulnera el derecho a la


libertad y locomoción, cuando su memorial de solicitud de audiencia de cesación a su detención
preventiva no es providenciado por más de dos semanas lo que le ocasiona una detención ilegal
y sobre todo se le daría un anticipo de cumplimiento de condena sin ni siquiera haber

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 85


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

requerimiento conclusivo. En consecuencia, en revisión corresponde determinar si tales


extremos son evidentes a objeto de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica, alcance y finalidad de la acción de libertad

La Constitución Política del Estado dentro de su concepción garantista, ha introducido una


diversidad de mecanismos procesales de defensa tendientes a efectivizar los derechos y garantías
constitucionales; en este orden la acción de libertad contemplada en el art. 125 de la CPE ha sido
instituida como un medio de defensa de los derechos y garantías a la libertad y a la vida,
derechos reconocidos por la misma Ley Fundamental mismos que no pueden ser vulnerados o
restringidos sin una justa razón o previo cumplimiento de las formalidades legales al efecto
establecidas por la normativa procesal penal vigente en el Estado Plurinacional de Bolivia.

Asimismo, el art. 65 de la LTCP determina que: “La acción de libertad es una acción
constitucional extraordinaria de tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía,
protección o tutela de los derechos a la vida a la libertad física y a la locomoción, para el
restablecimiento inmediato y efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos
suprimidos o amenazados de restricción o supresión”.

Por su parte el art. 66 de la LTCP previene: “La acción de libertad procede cuando cualquier
persona considere que: “1. Su vida está en peligro; 2. Está ilegalmente perseguida; 3. Está
indebidamente procesada; 4. Está indebidamente privada de libertad personal”.

Del marco normativo constitucional descrito; se infiere que la acción de libertad constituye una
acción de defensa de jerarquía constitucional que tiende a garantizar el ejercicio del derecho
fundamental a la libertad personal y de locomoción, extendiendo su ámbito de protección a la
vida cuando esta se encuentra afectada por la restricción o supresión de la libertad, vale decir
que esta acción hace frente a una situación de arbitrariedad emergente de autoridades y/o
particulares; que el órgano jurisdiccional que conozca de una acción de esta naturaleza, ordene
el cese de la persecución indebida o el restablecimiento de las formalidades legales y guarde la
tutela a la vida y en su caso, restituya el derecho a la libertad.

III.2. El principio de celeridad en las solicitudes de cesación de detención preventiva

Precisados los alcances y finalidad de la presente acción, cuyo objetivo esencial es el respeto y
restablecimiento del derecho a la libertad que ocupa un lugar importante junto a la dignidad
humana como un derecho fundamental conforme previene el art. 22 de la CPE que señala: “La
dignidad y la libertad de la persona son inviolables. Respetarlas y protegerlas es deber
primordial del Estado“; y cuando este derecho es restringido como medida cautelar, en su
tratamiento rige el principio de celeridad previsto por el art. 180.I de la CPE, que establece que
la jurisdicción ordinaria se funda en el principio de celeridad, precepto concordante con el art.
29.3 de la Ley del Órgano Judicial (LOJ); máxime si se considera que de acuerdo al sistema
procesal penal vigente, en relación al régimen de medidas cautelares de carácter personal, la
restricción o límite al derecho a la libertad física tiene carácter provisional sujeta a las
condiciones estipuladas en la normativa adjetiva penal y por ende modificable debido a su
naturaleza instrumental; en virtud a que la presunción de inocencia solo se desvirtúa ante un
fallo condenatorio con autoridad de cosa juzgada, caso contrario implicaría una condena
prematura. Dentro de este contexto, la doctrina reconoce el denominado hábeas corpus traslativo
o de pronto despacho, el cual pretende acelerar los trámites judiciales o administrativos ante la
existencia de dilaciones indebidas para resolver la situación jurídica de una persona que se
encuentra privada de libertad. Esta modalidad de hábeas corpus, se halla implícito en el art. 125

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 86


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de la CPE, cuando se hace referencia aquellos casos en que la persona considere que es
indebidamente privada de libertad; entendimiento que también se halla reflejado en el art. 66.4
de la LTCP.

La jurisprudencia del Tribunal Constitucional, contenida en las SSCC 0224/2004-R, 0848/2011,


entre muchas otras, concluyen que, bajo estos parámetros, debe entenderse que toda autoridad
jurisdiccional que conozca de una solicitud en la que se encuentre involucrado el derecho a la
libertad, tiene la obligación de efectuar el trámite con la mayor celeridad dentro de los plazos
razonables, lo que no implica que la solicitud tenga que ser deferida positivamente, sino que el
impetrante tenga respuesta ya sea positiva o negativa de acuerdo a cada caso en particular en
forma oportuna; por cuanto la vulneración del derecho a la libertad física también es susceptible
de traducirse en la demora o dilación indebida de estas solicitudes.

III.3. Análisis del caso concreto

De antecedentes se colige que dentro del proceso penal seguido al ahora accionante por el delito
de homicidio y lesiones graves y gravísimas en accidente de tránsito, su pretensión de considerar
la cesación de su detención preventiva fue objeto de una dilación injustificada en su
substanciación, cuando su solicitud de nueva audiencia no fue providenciada hasta la
presentación de la acción de libertad en análisis.

En relación a lo aseverado por el accionante en sentido de que su solicitud de audiencia de 5 de


enero de 2012 no fue providenciada hasta la presentación de su acción de libertad de 11 de enero
de 2012; de antecedentes se tiene que este hecho denunciado no es evidente, por cuanto esta
solicitud fue deferida mediante proveído de 9 de enero de 2012, plazo razonable teniendo
presente que los días 7 y 8 del mismo mes y año no fueron laborables conforme estableció el
Juez de garantías, señalando la citada audiencia para el 16 de ese mes; empero, la actuación del
Juez demandado se encuentra justificada debido a la excesiva carga procesal en razón a que no
solo ejercía suplencia del Juzgado Primero de Instrucción en lo Penal, sino también las que tuvo
que ejercer en otros despachos en el tiempo que se produjeron los hechos que motivaron la
presente acción de libertad.

Por otra parte, el art. 9.4 de la CPE garantiza el cumplimiento de los principios, valores,
derechos, deberes reconocidos y consagrados en la Constitución Política del Estado (CPE),
mismos que se trasuntan en las normas legales vigentes; sin embargo en el ámbito de la
administración de justicia ordinaria el art. 124 de la LOJ establece la suspensión de plazos
procesales, por circunstancias de fuerza mayor, que hicieron imposible la realización del acto
pendiente, artículo que se subsume en forma idónea al presente caso de autos.

En consecuencia, se concluye que el Juez de garantías, al haber denegado la acción de libertad,


ha efectuado una correcta compulsa de los antecedentes del proceso.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la
Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: DENEGAR la
tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 87


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0014/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00049-2012-01-AL
00061-2012-01-AL (acumulado)
Departamento: Oruro

En revisión la Resolución 01/2012 de 28 de enero, cursante de fs. 608 a 616 vta., del expediente
00049-2012-01-AL, pronunciada por el Tribunal Segundo de Sentencia del Tribunal
Departamental de Justicia de Oruro dentro de la acción de libertad, presentada por Rosario
Quispe Bustamante en representación sin mandato de Erika Rodríguez Velázquez contra
Máximo Rosendo Gutiérrez Rojas, Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, Beatriz Cortez
Vásquez y Virginia Colque, Vocales de la Sala Penal Primera del referido Tribunal
Departamental de Oruro; y la Resolución 01/2012 de 28 de enero, cursante de fs. 850 a 853, del
expediente 00061-2012-01-AL, pronunciada por el Tribunal Primero de Sentencia del Tribunal
Departamental de Justicia de Oruro dentro de la acción de libertad, interpuesta por Rosario
Quispe Bustamante en representación sin mandato de Rossio Aquino Rodríguez contra Beatriz
Cortez Vásquez y Virginia Colque Calle, Vocales del mismo Tribunal Departamental.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Expediente 00049-2012-01-AL

I.1.1 Contenido de la acción

La accionante, por memorial de 25 de enero de 2012, cursante de fs. 2 a 4 vta., manifestó que:

I.1.1.1. Hechos que la motivan

Dentro de la investigación penal seguida contra Erika Rodríguez Velásquez por el delito de
almacenaje, comercialización y compra ilegal de diesel oil, gasolina y gas licuado de petróleo
(GLP), el cual se encuentra en etapa de investigación en el Juzgado Tercero de Instrucción en lo
Penal y cautelar, por Resolución 938/2011 de 7 de diciembre, dictado por Máximo Rosendo
Gutiérrez Rojas, Juez de la causa se dispuso la detención preventiva en aplicación a lo dispuesto en
los arts. 234 numerales 1, 2 y 8, y 235.1 y 2 del Código de Procedimiento Penal (CPP), con el
argumento que la parte imputada únicamente justificó con documental suficiente su situación
domiciliaria pero no así la laboral, ni familiar. Posteriormente, el mismo Juez mediante Auto de 13
de diciembre de 2011, declaró improcedente la solicitud de cesación de detención preventiva
fundamentando que la imputada Erika Rodríguez Velásquez contaba con otro domicilio ubicado “en
las calles Magallanes entre Ayacucho Cochabamba”, según el testimonio de propiedad 1172, y por lo
que al no estar debidamente acreditado el domicilio de la imputada, presumiéndose por ende la
existencia de un doble domicilio, siendo éste el único argumento para mantener la detención
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 88
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

preventiva, Auto que fue apelado por su representada y no así por la parte contraria y que fue resuelta
por Magistradas de la Sala Penal Primera mediante Auto de Vista de 7 de enero de 2012, por el que
declaró improcedente el recurso planteado, manteniéndose su detención preventiva. Asimismo, señaló
que no sólo resolvió los aspectos cuestionados por Erika Rodríguez Velázquez, sino también se
añadió el presupuesto contenido en el art. 234.8 del CPP, cuando ese punto no fue motivo de la
apelación planteada por su representada.

Señala que la Resolución impugnada valoró los elementos de convicción en forma parcializada y
no así conforme disponen los arts. 221 y 222 del CPP, toda vez que en las aludidas Resoluciones
dictadas por las autoridades demandadas, cada una de ellas a su turno, señalaron que su
representada tendría dos domicilios, lo cual no es evidente, dada la situación de que en la primera
audiencia donde se resolvió su situación laboral por Resolución 938/2011 de 7 de diciembre,
dictado por el Juez de la causa sostuvo “…habiendo realizado una compulsa minuciosa de las
documentales acusadas por los imputados se advierte que simplemente tienden a justificar la
situación domiciliaria, no así la situación laboral y familiar, siendo que la documental resulta
insuficiente para acreditar aquellos extremos…”; y respecto al numeral 8 señaló “… en relación a
las coimputadas Rossio Aquino Rodríguez y Erika Rodríguez Velásquez se tendría antecedentes
que se ventilan en el mismo órgano jurisdiccional y que no ha sido motivo de observación por la
defensa técnica de las mismas”; entendiéndose que en dicha audiencia ya se justificó la existencia
de un domicilio habitual y permanente, Resolución que no fue motivo de apelación por ninguna de
las partes.

Aduce que ese agravio sufrido por el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal fue puesto a
conocimiento de la Sala Penal Primera, mediante el recurso de apelación, autoridades que lo
declararon improcedente, no obstante de haber presentado prueba que demuestra la existencia de
un domicilio habitual y permanente, sin tomar en cuenta el razonamiento de la SC 0400/2011-R.

I.1.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

La accionante estima como vulnerado el derecho a la libertad de su representada contenido al


efecto en los arts. 21.7 y 22 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción de libertad y, por ende, se deje sin efecto el Auto Interlocutorio
69/2011, dictado por el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal y el Auto de Vista 5/2012 de “7 de
enero” 10 de enero, emitido por las Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental
de Oruro y se disponga se dicte nueva resolución otorgándole la cesación a la detención preventiva
de su representada bajo medidas sustitutivas previstas en el art. 240 del CPP.

I.1.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 28 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 604 a
607 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.1.2.1. Informe de las autoridades demandadas

Máximo Rosendo Gutiérrez Rojas, Juez Tercero de Instrucción en lo Penal y cautelar, Beatriz
Cortez Vásquez y Virginia Colque Calle, Vocales de la Sala Penal Primera, todos del Tribunal
Departamental de Justicia de Oruro, no asistieron a la audiencia pública de la acción de libertad de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 89


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

28 de enero de 2012, no obstante su legal citación, conforme informó la Secretaria del Tribunal
Segundo de Sentencia Penal (fs. 604).

I.1.2.2. Resolución

El Tribunal Segundo de Sentencia Penal del Tribunal Departamental de Oruro compuesto por
los Jueces Técnicos, constituidos en Tribunal de garantías, mediante Resolución 01/2012 de 28
de enero, cursante de fs. 608 a 616 vta., concedió la acción de libertad disponiendo se deje sin
efecto el Auto Interlocutorio 982/2011 de 13 de diciembre, pronunciado por el Juez Tercero de
Instrucción en lo Penal, así como el Auto de Vista 05/2012 de 10 de enero, emitido por los ahora
demandados, conforme a los siguientes argumentos: a) El Juez cautelar debió hacer una
ponderación entre los nuevos elementos de juicio demostrados por la imputada con relación a
los motivos que en su oportunidad fundaron la extrema medida de la detención preventiva; b) En
oportunidad de considerarse la cesación a la detención preventiva de la representada de la
accionante, era deber del Juez cautelar tomar en cuenta que elementos se tenían por demostrados y
cuales aún debían acreditar en función al art. 239.1 del CPP, cuando refiere: “…que no concurren
los motivos que la fundaron…”; concluyendo que evidentemente el domicilio, ya se tenía por
acreditado en la primera audiencia de aplicación de medidas cautelares más allá de que la imputada
hubiera presentado nuevos instrumentos vinculados a criterio del referido Juez a otro domicilio, no
ameritaba ser estimado menos considerado, por cuanto ese elemento fue el motivo para que se
disponga su detención preventiva, menos podía concluir con la existencia de dos domicilios, pues
en la Resolución de cesación a la detención preventiva, se habría acreditado la actividad laboral así
como la relación familiar con los certificados de nacimiento; c) Con relación al mencionado art.
234.8, referente al peligro de fuga, señala que el órgano jurisdiccional al tiempo de imponer la
medida extrema de detención preventiva advirtió la existencia de otro proceso tramitado ante el
Juzgado Segundo cautelar, lo cual importaría la existencia de antecedentes en relación a la
imputada, empero, en oportunidad de considerarse la solicitud de cesación a la detención
preventiva, el Juez habría concluido que se encontraba en tela de juicio simplemente el elemento
del domicilio de la imputada; d) En cuanto a la Resolución que declaró improcedente la cesación a
la detención preventiva así como el Auto de Vista que confirmó la misma, fueron dictadas sin la
debida fundamentación, conforme establece el art. 124 del CPP, sobre los motivos de hecho y
derecho en que deban basarse las decisiones y fundamentalmente sobre el valor que se debe
otorgar a los medios de prueba vinculados siempre a los motivos de la cesación a la detención
preventiva de Erika Rodríguez Velásquez.

I.2. Expediente 00061-2012-01-AL

I.2.1. Contenido de la acción

La accionante mediante memorial de 27 de enero de 2012, cursante de fs. 623 a 624 vta., manifestó
que:

I.2.1.1. Hechos que la motivan

Dentro de la investigación penal seguida contra su representada Rossio Aquino Rodríguez por el
delito de almacenaje, comercialización y compra ilegal de diesel oil, gasolina y GLP, sancionados
por el art. 226 BIS del CP, el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal y cautelar del Tribunal
Departamental de Oruro mediante Resolución 938/2011 de 7 de diciembre, dispuso la detención
preventiva de su representada en aplicación de lo dispuesto en los arts. 234 numerales 1, 2 y 8 , y
235.1 y 2 del CPP, con el argumento que la parte imputada únicamente justificó con documental
suficiente su situación domiciliaria, pero no así la laboral ni familiar; posteriormente, el mismo

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 90


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Juez mediante Auto de 13 de diciembre de 2011, declaró procedente la solicitud de cesación de


detención preventiva y dispuso su libertad bajo medidas sustitutivas en razón a que se desvirtuó el
peligro de fuga y obstaculización, Resolución que fue revocada por las Vocales -demandadas-
mediante Auto de Vista de “7 de enero” 10 de enero de 2012 manteniéndose la detención
preventiva con el sólo argumento de que no se habría desvirtuado el riesgo procesal previsto en el
art. 234.8 del CPP.

Señala que la Resolución impugnada valoró los elementos de convicción en forma parcializada y
no así conforme disponen los arts. 221 y 222 del CPP, toda vez que se basó en el cuaderno procesal
de inicio de las investigaciones de una supuesta denuncia por el delito de agio del año 2010,
solicitado de oficio por las Vocales demandadas, es decir, sin que las denunciantes en la audiencia
de cesación a la detención preventiva hubieran presentado ningún documento que acredite el riesgo
de fuga respecto a la actividad reiterada prevista en el art. 234.8 del CPP y sin tener en cuenta que
su representada desvirtuó el peligro de fuga presentando informes del “REJAP” y antecedentes
policiales que demostraban que no contaba con dichos antecedentes, por lo que incurrieron en
procesamiento indebido que tiene como consecuencia la privación de libertad.

I.2.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante estima como vulnerado el derecho a la libertad de su representada contenido al


efecto en los arts. 21.7 y 22 de la CPE.

I.2.1.3. Petitorio

Solicitó se conceda la acción de libertad y, por ende, se deje sin efecto el Auto de Vista 5/2012 “7
de enero” 10 de enero, dictado por Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Oruro y se disponga se dicte nueva resolución confirmando el
fallo que dispuso medidas sustitutivas en favor de su representada.

I.2.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 28 de enero de 2012, según consta en el acta que cursa de fs. 846
a 849 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.2.1. Ampliación de la acción

La accionante por su representada Rossio Aquino Rodríguez ampliando los argumentos de su


demanda, señaló que las autoridades demandadas en contravención a lo dispuesto en los arts. 404 y
410 del CPP, produjeron prueba para la parte denunciante de oficio, pidiendo el cuaderno procesal de
investigación por el delito de agio del 2010, el que se encontraba en fotocopias simples señalando
expresamente que era una “…prueba aportada por la parte denunciante…”.

I.2.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Beatriz Cortez Vásquez y Virginia Colque Calle, Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Oruro, no asistieron a la audiencia pública de la acción de libertad
celebrada de 28 de enero de 2012, no obstante su legal notificación, conforme informó el Secretario
del Tribunal Primero de Sentencia Penal (fs. 226).

I.2.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 91


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Tribunal Primero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro compuesto por
los Jueces Técnicos, constituidos en Tribunal de garantías, mediante, Resolución 01/2012 de 28 de
enero, cursante de fs. 850 a 853, concedió la acción de libertad y dispuso la nulidad del Auto de
Vista 5/2012 de 10 de enero, a efectos de que las autoridades demandadas señalen audiencia
pública conforme a procedimiento, emitan nuevo fallo conforme a los siguientes argumentos: a)
Las autoridades demandadas al revocar la Resolución 982/2011, no realizaron una correcta
valoración del riesgo procesal previsto en el art. 234.8 del CPP, por cuanto debieron circunscribirse
a los antecedentes que motivaron la detención preventiva; asimismo, deben realizar un análisis de
los motivos por los cuales se dispuso dicha cesación de la detención preventiva en función a las
pruebas y argumentos que fueron presentados y escuchados en la audiencia cautelar y no así
generar prueba de oficio; b) Existe contradicción en los argumentos de la Resolución que revocó la
cesación de detención preventiva porque, haciendo alusión a la Resolución de detención
preventiva, primero aseveran que sólo existen “antecedentes que se ventilan en este despacho
judicial”, es decir, no dan certeza si se trata de una comunicación de inicio de investigaciones o de
una resolución de imputación formal, que es el acto procesal que inicia un proceso penal para que
se enmarque en la circunstancia de riesgo procesal de peligro de fuga contenido en el art. 234.8 del
CPP, referido a la existencia de actividad delictiva reiterada o anterior; y luego señalan que la parte
denunciante habría aportado prueba que consistiría en la existencia de un proceso penal, una
imputación formal y que los mismos significarían prueba idónea. Sin embargo, de la revisión
exhaustiva de la prueba no se ha comprobado la existencia de una resolución de imputación formal
contra la representada de la accionante, en este sentido, “…las autoridades accionadas pasaron a
considerar una prueba que no ha sido debatida ni presentada en ningún momento, es decir, ni a
tiempo de disponerse la detención preventiva menos en oportunidad de proceder a la cesación de la
detención…”; c) Con relación al riesgo procesal previsto en el art. 234.8 del CPP, la imputada
presentó en audiencia de cesación de detención preventiva los siguientes certificados: De
antecedentes penales expedido por la Dirección Nacional del Registro Judicial de Antecedentes
Penales (REJAP) referidos a sentencia condenatoria ejecutoriada, rebeldía o suspensión
condicional del proceso; de antecedentes policiales, de buena conducta expedido por el Director
del Centro Penitenciario; de Migraciones que demuestra no tener registro de pasaporte, y de la
Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de no haber obstaculizado la averiguación de
los hechos.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En vigencia de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, el 15 de febrero de 2012, se


procedió al sorteo de los expedientes 00049-2012-01-AL y 00061-2012-01-AL, los cuales fueron
acumulados mediante AC 0015/2012-CA/S, de 5 de marzo, encontrándose la presente Resolución
dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

II.1. Realizada la revisión y compulsa del expediente 00049-2012-01-AL, se concluye lo siguiente:

II.1.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Erika Rodríguez Velásquez -
representada de la accionante- por la presunta comisión del delito de almacenaje, comercialización y
compra ilegal de diesel y GLP, previsto en el art. 226 BIS.I y II del CP incluido por el art. 20 de la Ley
100 con relación al art. 23 de la misma norma, por Auto 938/2011 de 7 de diciembre (fs. 86 a 87), el
Juez Tercero de Instrucción en lo Penal dispuso su detención preventiva, en aplicación de los arts.
233.1 y 2, 234 y 235 del CPP, modificados por el art. 1 de la Ley 007 de 18 de mayo de 2010, es decir,
porque no desvirtuó los peligros de fuga y obstaculización demostrando sólo la situación domiciliaria y
no así la laboral ni familiar, además de concurrir lo dispuesto en el art. 234.8 del citado código,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 92


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

señalando in extenso que “…en relación a las coimputadas Rossio Aquino y Erika Rodríguez
Velásquez, de quienes se tiene antecedentes que se ventilan en este despacho judicial y que no han
sido motivo de observación por la defensa técnica de las mismas”.

II.1.2. Mediante Auto Interlocutorio 982/2011 de 13 de diciembre (fs. 215 a 217), el Juez
Tercero de Instrucción en lo Penal declaró improcedente la cesación de detención preventiva
solicitada para Erika Rodríguez Velásquez manteniendo incólume la Resolución de 7 de diciembre
de 2011, con el argumento de que los riesgos procesales referidos al domicilio, familia y la
actividad de la imputada no habían sido desvirtuados, pese a la prueba presentada en audiencia por
la imputada (fs. 115 a 160 vta.).

II.1.3. Respecto al riesgo procesal previsto en el art. 234.8 del CPP, la abogada de la víctima María
Dolores Alandia pidió complementación, aclaración y enmienda del Auto Interlocutorio 982/2011,
por cuanto -a decir suyo- existiría contra las imputadas Aquino y Rodríguez un proceso por el
delito de agio, habiendo el Juez cautelar mantenido firme e incólume la indicada Resolución de
cesación de la detención preventiva señalando que la Resolución de detención preventiva no
estableció la existencia de una imputación formal sino únicamente el inicio de investigación. En
cuyo mérito, en la misma audiencia interpuso apelación (fs. 217 vta.), fundamentando su
agravio en dicho riesgo procesal.

II.1.4. Por Auto de Vista 5/2012 de 10 de enero (fs. 595 a 601), las Vocales de la Sala Penal
Primera del Tribunal Departamental de Justicia, revocaron el Auto Interlocutorio 982/2011 de 13
de diciembre, con relación a la imputada Erika Rodríguez Velásquez y mantuvieron subsistente la
detención preventiva por la concurrencia del riesgo procesal de peligro de fuga contenido en el art.
234.1 respecto al domicilio y el numeral 8 del CPP, con los siguientes argumentos: 1) El juez a quo
no realizó una valoración apropiada de los elementos de prueba presentados con relación a lo
dispuesto en el art. 234.8 del citado código, por cuanto conforme a la prueba aportada por la
denunciante existe un proceso penal iniciado el 11 de marzo de 2010 contra Rossio Aquino
Rodríguez y Erika Rodríguez Velásquez a denuncia de Cilmar Cruz Villca por el delito de agio y la
existencia de una imputación formal de 27 de agosto del citado año, que sería la prueba idónea para
mantener subsistente la concurrencia prevista en el referido art. 234.8; 2) Los medios probatorios
presentados por Erika Rodríguez Velásquez en la audiencia de cesación de detención preventiva
si bien desvirtuaron los riesgos procesales que determinaron su detención preventiva referente al
art. 234.1 en relación a su familia y ocupación; sin embargo no lo hicieron respeto al domicilio, por
existir dos domicilios diferentes que no precisaban el lugar donde aquélla podía ser habida en todas
las instancias del proceso. De otro lado, tampoco se enervó el mencionado numeral 8.

II.2. De la revisión y compulsa del expediente 00061-2012-01-AL, se concluye lo siguiente:

II.2.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Rossio Aquino
Rodríguez - representada de la accionante- por la presunta comisión del delito de almacenaje,
comercialización y compra ilegal de diesel, gasolina y GLP, previsto en el art. 226 BIS.I y II del
CP, e incluido en el art. 20 de la Ley 100 con relación al art. 23 de la misma norma, por la
presunta comercialización de 20 a 25 garrafas de GLP, por Auto 938/2011 de 7 de diciembre (fs.
695 a 696), el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, dispuso su detención preventiva, en
aplicación de los arts. 233.1 y 2, 234 y 235 del CPP, modificados por el art. 1 de la Ley 007 de
18 de mayo de 2010, es decir, porque no desvirtuó los peligros de fuga y obstaculización,
demostrando sólo la situación domiciliaria y no así la laboral ni familiar, además de concurrir lo
dispuesto en el art. 234.8 del CPP, señalando in extenso que “…en relación a las coimputadas
Rossio Aquino y Erika Rodríguez Velásquez, de quienes se tiene antecedentes que se ventilan en

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 93


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

este despacho judicial y que no han sido motivo de observación por la defensa técnica de las
mismas” (las negrillas agregadas).

II.2.2. Mediante Auto Interlocutorio 982/2011 de 13 de diciembre (fs. 810 a 812 vta.), el Juez
Tercero de Instrucción en lo Penal declaró procedente la cesación de detención preventiva
solicitada por Rossio Aquino Rodríguez en aplicación de los arts. 239.1 y 2, 235.1 y 2 y 240 del
CPP, modificados por el art. 1 de la Ley 007 de 18 de mayo y aplicó las medidas sustitutivas de
detención domiciliaria, la obligación de presentarse semanalmente ante las autoridades judiciales
y del Ministerio Público a objeto de suscribir el correspondiente libro de presentaciones, arraigo
e imponiendo la fianza económica en la suma de Bs2 000.- (dos mil bolivianos), con el
argumento de que se habría desvirtuado el peligro de fuga por haber acreditado domicilio y
familia constituida, situación laboral e inexistencia de pasaporte, así como el riesgo procesal de
obstaculización por cuanto existen certificados de antecedentes personales de buena conducta y
“…no existiendo constancia alguna de que ambas imputadas estén modificando, destruyendo o
alterando medios de prueba así como la influencia negativa sobre testigos, peritos, etc. para
beneficiarse…”.

II.2.3. Según el acta de registro de audiencia pública para considerar la cesación de la detención
preventiva (fs. 805 a 809), la abogada de la víctima observando la prueba presentada por las
imputadas refirió que la representada de la ahora accionante no acreditó existencia de
domicilio, de una actividad laboral lícita y respecto al certificado de antecedentes policiales y
penales señaló que los mismos: “…no corresponden a la realidad puesto que la 'señora Aquino'
también ha sido imputada por el delito de agio anteriormente, caso que se está llevando ante el
Juzgado Segundo en lo Penal cautelar, prueba que también ha sido compulsada por el Juez de esas
instancias…”, señalando más adelante que: “…la defensa no ha desvirtuado de ninguna manera los
peligros procesales por los cuales se ha dispuesto la detención preventiva de las 'señoras Aquino y
Rodríguez' tales como el art. 234 numerales 6 y 8 del CPP…, teniéndose la certeza de que ambas
señoras están siendo procesadas paralelamente por el delito de agio que tiene que ver con la venta
de GLP en garrafas, por lo que deberá compulsarse este elemento por demás importante y
denegarse la solicitud de la parte de cesación de detención preventiva…”.

Por lo que, respecto al riesgo procesal previsto en el art. 234.8 del CPP, solicitó complementación,
aclaración y enmienda de la Auto Interlocutorio 982/2011, por cuanto - a decir suyo- existiría
contra las imputadas Rossio Aquino Rodríguez y otro un proceso por el delito de Agio, habiendo el
Juez cautelar mantenido firme e incólume la indicada Resolución de cesación de la detención
preventiva señalando que el fallo de detención preventiva no estableció la existencia de una
imputación formal sino únicamente el inicio de investigación. En cuyo mérito, en la misma
audiencia interpuso apelación (fs. 812 vta.), fundamentando su agravio en dicho riesgo
procesal.

II.2.4. Por Auto de Vista 5/2012 de 10 de enero (fs. 839 a 845), las Vocales de la Sala Penal
Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro, revocaron el Auto Interlocutorio
982/2011, con relación a la imputada Rossio Aquino Rodríguez y, por ende, mantuvieron la
detención preventiva por la concurrencia del riesgo procesal de fuga contenido en el art.
234.8 del CPP, con los siguientes argumentos: a) El Juez a quo no realizó una valoración
apropiada de los elementos de prueba presentados con relación a lo dispuesto en el art. 234.8 del
citado código, por cuanto conforme a la prueba aportada por la denunciante existe un proceso penal
iniciado el 11 de marzo de 2010 contra Rossio Aquino Rodríguez y otra a denuncia de Cilmar Cruz
Villca por el delito de agio y la existencia de una imputación formal de 27 de agosto de 2010, que
sería la prueba idónea para mantener subsistente la concurrencia prevista en el mencionado art.
234.8; b) Los medios probatorios presentados por Rossio Aquino Rodríguez y otra, presentados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 94


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

en la audiencia de cesación de detención preventiva sólo justifican la existencia de familia,


domicilio y ocupación y no así respecto al riesgo de fuga contenido en el art. 234.8 del CPP; c)
Que es el propio Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, quien declaró la cesación de detención
preventiva de la representada de la accionante, quien en Resolución de 7 de diciembre de 2011,
afirmó que existían antecedentes contra la imputada en su despacho judicial.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

En el expediente 00049-2012-01-AL, la accionante, por su representada Erika Rodríguez


Velásquez, sostiene que las autoridades judiciales demandadas a su turno lesionaron su derecho a
la libertad, por cuanto, el Juez cautelar rechazó su solicitud de cesación de detención preventiva
sosteniendo la existencia de dos domicilios, sin tener en cuenta que en la audiencia de cesación
demostró la existencia de uno habitual y permanente; extremo que fue corroborado por las Vocales
demandadas en apelación incidental interpuesta por la imputada, manteniendo incólume la
detención preventiva de su representada, con el fundamento de la concurrencia de los riesgos
procesales contenidos en el art. 234.1 y 8 del CPP, indicando que respecto a este último inciso se
hubieran basado en el cuaderno procesal del inicio de las investigaciones de una denuncia por el
supuesto delito de agio del año 2010, que fue producido como prueba de oficio por las indicadas
autoridades.

De otro lado, en el expediente 00061-2012-01-AL acumulado, la accionante, con relación a la


situación jurídica de Rossio Aquino Rodríguez, señaló que las Vocales demandadas lesionaron el
derecho a la libertad de su representada consagrado en los arts. 21.7 y 22 de la CPE, por cuanto
revocaron la Resolución de cesación de detención preventiva con el único argumento de que no se
habría desvirtuado el riesgo procesal previsto en el art. 234.8 del CPP, basándose en el cuaderno
procesal del inicio de las investigaciones de una denuncia por el supuesto delito de agio del año
2010, que fue producido como prueba de oficio por las indicadas autoridades incurriendo en
procesamiento indebido e indebida privación de libertad.

En ese orden, corresponde analizar en revisión, si los argumentos de ambas acciones de libertad,
son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos al derecho a la libertad, a fin de conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. Condiciones de validez para la restricción del derecho a la libertad física o personal
y criterios de interpretación para la aplicación de medidas cautelares

El derecho a la libertad personal es reconocido como un derecho fundamental en la Constitución


Política del Estado y los principales instrumentos internacionales de Derechos Humanos.

Así el art. 23.I de la CPE, reconoce el derecho a la libertad personal, estableciendo que ésta sólo
puede ser restringida en los límites señalados por la ley, para asegurar el descubrimiento de la
verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales. Conforme a ello, el parágrafo III
de la misma norma dispone que: “Nadie podrá ser detenido, aprehendido o privado de su libertad,
salvo en los casos y según las formas establecidas por la ley. La ejecución del mandamiento
requerirá que éste emane de autoridad competente y que sea emitido por escrito”.

Por su parte, el art. 9.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP) determina
que: “Todo individuo tiene derecho a la libertad y a la seguridad personal. Nadie podrá ser
sometido a detención o prisión arbitrarias. Nadie podrá ser privado de su libertad, salvo por las
causas fijadas por ley y con arreglo al procedimiento establecido en ésta”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 95


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por otro lado, la Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH) enuncia en su art. 7.1,
que: “Toda persona tiene derecho a la libertad personal y a la seguridad personal”, el art. 7.2 de la
misma dice: “Nadie puede ser privado de su libertad física, salvo por las causas y en las
condiciones fijadas de antemano por las Constituciones Políticas de los Estados Partes o por las
leyes dictadas conforme a ellas” y el art. 7.3 establece que “Nadie puede ser sometido a detención
o encarcelamiento arbitrarios”.

Dichas normas constitucionales e internacionales de Derechos Humanos, junto a la jurisprudencia


de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que forman parte del bloque de
constitucionalidad conforme el art. 410.II de la CPE, son coincidentes en establecer las condiciones
de validez formal y material para la restricción del derecho a la libertad, conforme lo entendió la
SC 2558/2010-R de 19 de noviembre, señalando que:“… para que una restricción al derecho a la
libertad sea constitucional y válida, se deben cumplir con determinados requisitos materiales y
formales. Respecto a los primeros, sólo se puede restringir el derecho a la libertad en los casos
previstos por Ley, que de acuerdo a la Opinión Consultiva (OC) 6/86 de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos debe tratarse de una Ley formal, es decir de aquella que emana del órgano
legislativo. Con relación a los requisitos formales, la restricción al derecho a la libertad sólo será
válida si se respetan las formas establecidas por ley, si el mandamiento emana de autoridad
competente y es emitido por escrito, salvo el caso de flagrancia, de conformidad a lo establecido
por el art. 23.IV de la CPE.

Estas condiciones de validez, también han sido desarrolladas por la jurisprudencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos. Así en la Sentencia de 21 de enero de 1994, caso
Gangaram Panday, la Corte señaló: “…Nadie puede ser privado de la libertad personal sino por
las causas, casos o circunstancias expresamente tipificadas en la ley (aspecto material) pero,
además, con estricta sujeción a los procedimientos objetivamente definidos por la misma (aspecto
formal)”.

Ese también fue el criterio, por otra parte, del Tribunal Constitucional, contenido en las
numerosas sentencias, como las SSCC 0697/2003-R, 1141/2003-R y 0540/2004-R, partiendo de la
interpretación de las normas de la Constitución abrogada y de los Pactos Internacionales sobre
Derechos Humanos.

Ahora bien, en materia penal, los casos en los que una persona puede ser privada de su libertad
están expresamente previstos en el Código Penal, tratándose de sanciones penales, y en el
Código de Procedimiento Penal, tratándose de medidas cautelares, entre ellas, la detención
preventiva”.

En consecuencia, siguiendo la jurisprudencia de la Corte Interamericana, caso Gangaram Panday


citada y glosada en la SC 2558/2010-R, la restricción del derecho a la libertad física o personal en
medidas cautelares, no cumple con las condiciones de validez en su aspecto formal cuando la
autoridad judicial no se sujeta a los procedimientos definidos por el Código de Procedimiento
Penal, es decir, a las reglas sobre la detención preventiva, los supuestos de cesación de la misma,
sus requisitos y circunstancias para considerar los riesgos procesales, normas que deben ser
aplicadas conforme a los criterios de interpretación para la aplicación de medidas cautelares
establecidos en la propia Ley Fundamental y en el Código de Procedimiento Penal contenidos en
los arts. 23.I de la CPE norma que está en armonía con lo dispuesto en los arts. 7, 221 y primer
párrafo del art. 222 del CPP.

Esos criterios de interpretación también están en los instrumentos internacionales sobre


Derechos Humanos y la jurisprudencia de la Corte Interamericana sobre Derechos Humanos. En

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 96


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

efecto, la Sentencia de 12 de noviembre de 1997 (Fondo), caso Suárez Rosero párrafo 77,
citando el art. 9.3 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que dispone que la
prisión preventiva de las personas que hayan de ser juzgadas no debe ser la regla general,
estableció que la obligación del Estado a través de sus jueces, a tiempo de imponer medidas
cautelares privativas de la libertad personal o física, es la no restricción de la libertad del
detenido más allá de los límites estrictamente necesarios para asegurar que no impedirá el
desarrollo eficiente de las investigaciones y que no eludirá la acción de la justicia, pues la
prisión preventiva es una medida cautelar, no punitiva, en razón a que la restricción al derecho a
libertad personal en casos de denuncias de prisión preventiva - detención preventiva en nuestra
tradición jurídica- están vinculadas con el principio de presunción de inocencia amparado por el
art. 8.2 de la CADH. Así señaló: “Esta Corte estima que en el principio de presunción de
inocencia subyace el propósito de las garantías judiciales, al afirmar la idea de que una
persona es inocente hasta que su culpabilidad sea demostrada. De lo dispuesto en el artículo
8.2 de la Convención se deriva la obligación estatal de no restringir la libertad del detenido
más allá de los límites estrictamente necesarios para asegurar que no impedirá el desarrollo
eficiente de las investigaciones y que no eludirá la acción de la justicia, pues la prisión
preventiva es una medida cautelar, no punitiva. Este concepto está expresado en múltiples
instrumentos del derecho internacional de los derechos humanos y, entre otros, en el Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que dispone que la prisión preventiva de las
personas que hayan de ser juzgadas no debe ser la regla general (art. 9.3). En caso contrario
se estaría cometiendo una injusticia al privar de libertad, por un plazo desproporcionado
respecto de la pena que correspondería al delito imputado, a personas cuya responsabilidad
criminal no ha sido establecida. Sería lo mismo que anticipar una pena a la sentencia, lo cual está
en contra de principios generales del derecho universalmente reconocidos”.

III.2. La cesación de la detención preventiva por el supuesto contemplado en el art. 239.1


del CPP y el marco de análisis del Tribunal de alzada que resuelve la apelación incidental

El art. 239.1 del CPP - incluso después de la reforma efectuada por Ley 007 de 18 de mayo de
2010- determina que la detención preventiva cesará: “Cuando nuevos elementos de juicio
demuestren que no concurren los motivos que la fundaron o torne conveniente que sea sustituida
por otra medida”.

De acuerdo a la previsión contenida en el art. 239.1 del CPP antes referido, para resolver una solicitud
de cesación de la detención preventiva amparada en esa causal, el Juez o Tribunal debe realizar el
análisis ponderado de dos elementos: 1) ¿Cuáles fueron los elementos de convicción que
determinaron la imposición de la detención preventiva? y, 2) ¿Los nuevos elementos de convicción
que aportó el imputado demuestran que ya no concurren los motivos que determinaron la medida o la
conveniencia de que la medida sea sustituida por otra?, conforme lo precisó la jurisprudencia
constitucional uniforme contenida en las SSCC 0320/2004-R, SC 0719/2004-R, 1466/2004-R,
0807/2005-R, y 0568/2007-R.

Así la SC 0320/2004-R de 10 de marzo, señaló: “Cuando el juez o tribunal deba una solicitud de
cesación de la detención preventiva amparada en la previsión del art. 239.1 del CPP, ésta debe
ser el resultado del análisis ponderado de dos elementos: i) cuáles fueron los motivos que
determinaron la imposición de la detención preventiva y ii) cuáles los nuevos elementos de
convicción que aportó el imputado para demostrar que ya no concurren los motivos que la
determinaron o en su caso demuestren la conveniencia de que la medida sea sustituida por otra.
Quedando claro que si a través de los nuevos elementos de juicio que se presenten por el imputado
se destruyen ambos o cualquiera de los motivos que fundaron la detención preventiva, el Juez o
Tribunal debe realizar una valoración de estos nuevos elementos; valoración similar a la que hizo

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 97


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

para disponer la detención preventiva a prima facie, sin que ello implique inmiscuirse en la
investigación del hecho. Debiendo, en consecuencia el imputado probar conforme a la norma
precedentemente señalada la existencia de nuevos elementos de juicio que demuestren que no
concurren los motivos que fundaron su detención preventiva o tornen conveniente que sea
sustituida por otras medidas”.

Ahora bien, este análisis concurrente de los dos elementos previstos en el art. 239.1, no sólo
vincula al juez que resuelve la solicitud de cesación de detención preventiva sino también al
tribunal de alzada que resuelve la apelación incidental, empero cuando el tribunal a quem analice
dichos elementos debe sujetar su examen al marco de lo establecido en el art. 398 del CPP, que
expresamente dispone: “Los tribunales de alzada circunscribirán sus resoluciones a los aspectos
cuestionados de la resolución”.(negrillas agregadas).

En ese sentido se pronunció la SC 1340/2005-R de 25 de octubre, en un caso en el que los Vocales


“recurridos” inobservaron lo dispuesto en el art. 398 del CPP, a tiempo de resolver una solicitud de
cesación de la detención preventiva sin sujetarse a los argumentos de la Resolución que la resolvió y a
los puntos expuestos como agravios por el apelante, sino que contrariamente expusieron otra
motivación; por lo que otorgó la tutela disponiendo que dichos Vocales dicten nueva resolución
conforme a los fundamentos expresados en dicho fallo constitucional, con el siguiente precedente: “El
referido entendimiento, también debe ser observado por el Tribunal que conozca la solicitud de
cesación en apelación, vale decir, que su parámetro de análisis deberá sujetarse a establecer en una
primera fase: a) cuales fueron los requisitos que consideró concurrentes el Juez cautelar al disponer
la detención preventiva; y b) cuáles son los nuevos elementos de juicio que alega y demuestra el
imputado. Sin embargo, debido a la naturaleza de su obligación -resolver una apelación-, el análisis
tendrá una segunda fase consistente en contrastar los elementos de juicio presentados en la primera
fase con los fundamentos de agravio expuestos por la parte apelante, con lo que queda claro que el
Tribunal a quem no podrá por si, exponer otros fundamentos que no estén vinculados a su vez a
los que motivaron la detención, los expuestos en la solicitud de cesación y los de la apelante, pues
de no sujetarse a este marco de análisis, infringiría la norma prevista por el art. 398 del CPP, que
expresamente dispone: 'Los tribunales de alzada circunscribirán sus resoluciones a los aspectos
cuestionados de la resolución', disposición que asegura el cumplimiento de las normas del debido
proceso y con ello la igualdad efectiva de las partes, de modo que el Juez se rija por el eje de la
imparcialidad, sin poder suplir la negligencia de las partes u otorgarles más allá de lo que han
solicitado” (el resaltado es añadido).

En ese sentido también está la SC 2558/2010-R de 19 de noviembre, anteriormente citada que


estableció que los Tribunales de apelación que resuelven una solicitud de cesación de detención
preventiva están vinculados:”…a la resolución impugnada y a los puntos apelados, expuestos
como agravio, delimitan el campo de acción al que estará sujeto el Tribunal de alzada a tiempo de
compulsar y valorar la prueba presentada como nuevos elementos probatorios, a efectos de
determinar si la resolución impugnada actuó conforme a derecho a tiempo de denegar o conceder
la solicitud de cesación de la detención preventiva …”.

Consecuentemente, el tribunal de alzada que resuelve la apelación incidental de la solicitud de


cesación de la detención preventiva por el supuesto contemplado en el art. 239.1 del CPP, en su
resolución debe realizar el análisis ponderado de dos elementos: 1) ¿Cuáles fueron los elementos
de convicción y supuestos que determinaron la imposición de la detención preventiva? y, 2) ¿Los
nuevos elementos de convicción que aportó el imputado demuestran que ya no concurren los
motivos que determinaron la medida o la conveniencia de que la medida sea sustituida por otra?,
análisis que debe realizarse en el marco de lo establecido en el art. 398 del CPP, que dispone
que “Los tribunales de alzada circunscribirán sus resoluciones a los aspectos cuestionados de la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 98


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

resolución” (negrillas agregadas), es decir, contrastando los dos primeros elementos, con estos
otros dos: 1) ¿Cuáles fueron los puntos expuestos como agravios por el apelante?; y 2) ¿Cuáles los
fundamentos de la resolución que resolvió la cesación de detención preventiva en primera
instancia?.

III.3. La valoración objetiva e integral de los elementos probatorios en la cesación de


detención preventiva al amparo del art. 239.1 del CPP por el Tribunal de alzada

En coherencia con la línea jurisprudencial señalada, se tiene que el análisis de los elementos
previstos en el art. 239.1 en el marco de lo establecido en el art. 398, que realice el tribunal de
alzada a tiempo de resolver en apelación la solicitud de detención preventiva debe ser en forma
motivada y con una valoración objetiva e integral de la prueba aportada por ambas partes
procesales.

Así lo estableció la SC 0568/2007-R de 5 de julio, citando a la SC 1249/2005-R de 10 de octubre, en


un caso en el que tanto el Juez cautelar como el Tribunal a quem no expresaron los fundamentos
que permitiesen inferir de manera objetiva que los imputados no habían desvirtuado, a tiempo de
solicitar cesación de la detención preventiva, la inexistencia de riesgo de fuga y/o obstaculización
de la averiguación de la verdad, con el siguiente precedente:"…el análisis integral de los nuevos
elementos presentados por el imputado para obtener la cesación de la detención preventiva, no
sólo alcanza al juez cautelar, sino también al tribunal que conozca en apelación la resolución que
conceda o rechace la cesación de la detención preventiva, toda vez que si bien de conformidad con
el art. 251 del CPP, las medidas cautelares dispuestas por el juez cautelar, pueden ser apeladas y,
por lo mismo, modificadas, ello no significa que el tribunal de apelación cuando determine
revocar la concesión o rechazo de la cesación de la detención preventiva, esté exento de
pronunciar una resolución lo suficientemente motivada y de la necesidad de realizar una
valoración integral de los nuevos elementos presentados por el imputado, expresando si los
mismos destruyen o no los motivos que fundaron la detención preventiva”.
“… al resolver la cesación de la detención preventiva, el Juez de Instrucción debe considerar si
con los nuevos elementos de juicio el imputado logra destruir o modificar sustancialmente los
motivos que fundaron la detención preventiva, y de no darse esa situación, el Juzgador rechazará
la solicitud, pero para ello es necesario que su determinación contenga una explicación motivada
de las razones por las cuales persisten los motivos que fundaron la detención preventiva,
condición que también se aplica al Tribunal de alzada que pudiese conocer en revisión la
determinación asumida por el Juez a quo, pues el Juez o Tribunal de apelación de igual forma
debe pronunciar una resolución lo suficientemente motivada, realizando una valoración
integral de los nuevos elementos presentados por el imputado, expresando si los mismos
destruyen o no los motivos que fundaron la detención preventiva” (el resaltado es añadido).

En ese mismo sentido está la SC 1147/2006-R de 16 de noviembre, al determinar: “ …la


resolución que resuelva la solicitud de cesación de la detención preventiva debe reunir las
condiciones de validez, para ello la autoridad judicial competente a tiempo de contrastar los
nuevos elementos presentados por el imputado, deberá fundamentar la decisión de conceder o
rechazar la solicitud de cesación de la detención expresando los motivos de hecho y de derecho en
que funda su determinación, los cuales deben obedecer a criterios objetivos, exponiendo el valor
otorgado a los medios de prueba presentados y sujetando su análisis a los presupuestos que
fundaron la detención preventiva del imputado, la fundamentación que no puede ser reemplazada
por la simple relación de los documentos o la mención de los requerimientos de las partes, sino las
razones jurídicas que justifican la decisión adoptada”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 99


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por su parte, la SC 1147/2006-R, respecto a qué debe entenderse por valoración objetiva e
integral de los elementos probatorios en la cesación de detención preventiva, señaló:“…no debe
tomar un solo elemento de los previstos en los arts. 234 y 235 CPP, para sostener su decisión de
rechazo, sino que debe valorar todos los elementos y finalmente decidir en la forma que sea menos
gravosa para el imputado, lo que no implica que por ello, ponga en riesgo el desarrollo del
proceso y la averiguación de la verdad, pues si bien éste es de relevancia cuando se les presenta
una solicitud de cesación, no es menos cierto que, la libertad según el mismo Código adjetivo
penal en su art. 221, sólo puede ser restringida cuando es realmente necesaria y en todo caso,
como ya se estableció en caso de duda, también el art. 7 del mismo cuerpo legal dispone que:
´Cuando exista duda en la aplicación de una medida cautelar o de otras disposiciones que
restrinjan derechos o facultades del imputado, deberá estarse a lo que sea más favorable a
éste…”.

A lo señalado y, en coherencia con dicha línea jurisprudencial, se añade que cuando se trata de la
valoración objetiva e integral de los elementos probatorios en la cesación de detención preventiva
al amparo del art. 239.1 del CPP, es deber del juez y también del tribunal de alzada tomar en
cuenta en forma integral los nuevos elementos de juicio aportados por el imputado que demuestran
que no concurren los motivos que fundaron se disponga su detención preventiva o existen otros
que tornen conveniente sustituirla por otra medida; y los aportados como prueba por la parte
acusadora o víctima que acreditan que tales motivos subsisten, exigencia que está prevista en la
ley, conforme lo establece el párrafo segundo del art. 234 del CPP, respecto al peligro de fuga que
establece que para decidir acerca de su concurrencia, se realizará una evaluación integral de las
circunstancias existentes, teniendo igual redacción el art. 235 del CPP, respecto al riesgo procesal
de peligro de obstaculización.

Ello, en razón a que para acordar y mantener una detención preventiva hay que valorar todas las
circunstancias que concurren en cada caso, teniendo en cuenta el criterio favorable al derecho a la
libertad personal o física. En efecto, para que una resolución judicial de detención preventiva o de
rechazo de cesación a la detención sea fundada en derecho, debe pronunciarse cuidadosamente
evaluando todas las circunstancias concurrentes en el caso, es decir, toda la prueba disponible en el
momento en que ha de adoptarse la decisión que hubiere sido aportada por las partes, por lo que no
podrá fundarse una resolución judicial basándose únicamente en una circunstancia existiendo otras
que puedan confirmar la inexistencia de los peligros de fuga y obstaculización.

III.4. El caso de examen

III.4.1. Respecto a si la Resolución del Juez Tercero de Instrucción en lo Penal al rechazar la


cesación de detención preventiva de Erika Rodríguez Velásquez circunscribió su análisis al
art. 239.1 del CPP (expediente 00049-2012-01-AL)

De los antecedentes remitidos a este Tribunal Constitucional Plurinacional se tiene que el Juez
cautelar dispuso por Auto 938/2011 de 7 de diciembre la detención preventiva de Erika Rodríguez
Velásquez con el argumento de que la imputada simplemente justificó la situación domiciliaria y
no así la laboral ni familiar y que la documental presentada resultaba insuficiente. Además que se
tendrían antecedentes de un proceso por el delito de agio que no fue motivo de observación por la
defensa técnica y que ello acreditaba la concurrencia del riesgo procesal de peligro de fuga
contenido en el art. 234.8 del CPP.

Posteriormente, el mismo Juez mediante Auto de 13 de diciembre de 2011, declaró improcedente


la cesación de detención preventiva con respecto a Erika Rodríguez Velásquez en razón a que la
documentación que la misma presentó resultaba contradictoria ya que contaría con doble

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 100


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

domicilio, pese a ello cuando el art. 239 del CPP establece que: “Cuando nuevos elementos de
juicio demuestren que no concurren los motivos que la fundaron o tornen conveniente que sea
sustituida por otra medida” la primera parte debe entenderse en el marco de la segunda y en el
marco de la jurisprudencia constitucional que obliga a los jueces a efectuar una valoración integral
de los supuestos y pruebas que dieron lugar a la detención preventiva, en este sentido el aspecto
domiciliario se discutió desde la audiencia que dispuso la misma y durante su cesación nuevamente
fue debatido por documentación que la misma presentó a efectos de obtener su libertad sin que este
Tribunal pueda revisar la valoración de la prueba efectuada por el juez de la causa, dejándose
además en claro que la imputada mediante su abogada realizó diferentes alegaciones al respecto y
tuvo oportunidad para responder a las observaciones efectuadas por la Fiscal de la causa y el
abogado de la víctima a la constitución de su domicilio por lo que tampoco existió indefensión
alguna y respecto a la falta de fundamentación debe recordarse que por la naturaleza de la decisión
es decir modificable y conforme la SC 0012/2006-R de 4 de enero: “…no supone que las
decisiones jurisdiccionales tengan que ser exhaustivas y ampulosas o regidas por una particular
estructura; pues se tendrá por satisfecho este requisito aun cuando de manera breve, pero concisa
y razonable, permita conocer de forma indubitable las razones que llevaron al Juez a tomar la
decisión; de tal modo que las partes sepan las razones en que se fundamentó la resolución…”
correspondiendo a este Tribunal únicamente verificar la existencia de una fundamentación
razonable, pero no hacer de otra instancia procesal.

Con relación a la imputada Rossio Aquino Rodríguez no amerita consideración, toda vez que el
Juez de la causa dispuso medidas sustitutivas.

III.4.2. Respecto al respeto del principio de reformatio in peius por parte de las Vocales
demandadas ante la apelación de Erika Rodríguez Velásquez (expediente 00049-2012-01-AL)

Del análisis del Auto de Vista 5/2012 de 10 de enero, que resolvió la apelación formulada por la
imputada Erika Rodríguez Velásquez manteniendo subsistente su detención preventiva se tiene que
las autoridades judiciales demandadas sujetaron su análisis a los elementos previstos en el art.
239.1 del CPP y en el marco de lo establecido en el art. 398 del CPP, conforme se precisó en la
reiterada jurisprudencia constitucional (Fundamento Jurídico III.2), por cuanto resolvieron en
apelación los aspectos referidos al art. 234.1 y 8 del CPP, debatidos desde la resolución de
detención preventiva respecto a los cuales la defensa tuvo amplia oportunidad de controvertir,
resolviendo por ello sobre lo debatido y considerando los aspectos de la apelación aclarándose que
la parte adversa en este tipo de apelación en virtud al principio de igualdad y verdad material
siguiendo el procedimiento correspondiente podía efectuar alegaciones y aportar prueba que
desvirtúe los supuestos de apelación de la accionante.

III.4.3. Sobre si los vocales demandados valoraron objetiva e integralmente los elementos
probatorios aportados por las partes a tiempo de resolver la cesación de detención preventiva al
amparo del art. 239.1 del CPP solicitada por Rossio Aquino Rodríguez (expediente 00061-2012-
01-AL)

De otro lado, se tiene que del contenido de los argumentos que sustentaron la parte resolutiva del
Auto de Vista 5/2012, que resolvió en apelación la cesación de detención preventiva de la
representada de la accionante, en sentido de que mantener su detención preventiva por la sola
concurrencia del riesgo procesal de fuga contenido en el art. 234.8 del CPP, es posible concluir
que el Tribunal de alzada no realizó una valoración integral y objetiva de todos los elementos de
convicción para sostener su rechazo. En efecto, las autoridades demandadas no evaluaron todas
las circunstancias concurrentes en el caso y, por el contrario, fundaron su resolución basándose
únicamente en el riesgo procesal señalado, sin tener en cuenta que existían otras circunstancias

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 101


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que podían confirmar la inexistencia o existencia de los peligros de fuga y obstaculización que
fueron objeto de prueba por la parte imputada.

Es decir, las autoridades judiciales se limitaron a señalar que el Juez a quo realizó una
valoración inapropiada de los elementos de prueba presentados con relación a lo dispuesto en el
art. 234.8 del CPP, por cuanto conforme a la prueba aportada por la denunciante existía un
proceso penal iniciado el 11 de marzo de 2010 contra Rossio Aquino Rodríguez y otra a
denuncia de Cilmar Cruz Villca por el delito de agio, además de una imputación formal de 27 de
agosto del mismo año, que -a su juicio- era la prueba idónea para mantener subsistente la
concurrencia prevista en el art. 234.8. Así también que los medios probatorios presentados por
Rossio Aquino Rodríguez y otra, presentado en la audiencia de cesación de detención preventiva
sólo justificaban la existencia de familia, domicilio y ocupación y no así respecto al riesgo de
fuga contenido en el art. 234.8 del referido código; y que fue el propio Juez Tercero de
Instrucción en lo Penal, que dispuso la detención preventiva, quien afirmó que existían
antecedentes contra la imputada en su despacho judicial.

Argumentos que contradicen lo establecido en el párrafo segundo del art. 234 y art 235 del CPP,
sobre la exigencia de evaluación integral de las circunstancias referidas a los riesgos
procesales de peligro de fuga y peligro de obstaculización y se apartan de los criterios de
interpretación para la aplicación de medidas cautelares que restringen el derecho a la libertad
personal o de locomoción establecidos en la Ley Fundamental (art. 23.I), en el Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos (art. 9.3), la jurisprudencia de la Corte
Interamericana sobre Derechos Humanos (Sentencia de 12 de noviembre de 1997 - Fondo-, caso
Suárez Rosero párrafo 77 citados en este fallo en el Fundamento Jurídico III.4), y los arts. 7, 221
y primer párrafo del 222 del CPP, normas que orientan la labor del juzgador en sentido de que la
aplicación de medidas cautelares restrictivas a la libertad personal no son medidas punitivas, por
lo mismo, su imposición no debe ser la regla por cuanto tienen únicamente la finalidad de
asegurar que no se impedirá el desarrollo eficiente de las investigaciones y que no se eludirá la
acción de la justicia.

En cuyo mérito corresponde otorgar la tutela solicitada, con mayor razón si este Tribunal
advierte que las Vocales demandadas sustentaron su decisión en un riesgo procesal que si bien
fue discutido en el trámite de cesación de la detención preventiva y apelación, empero, no tenían
certeza de que hubiera sido probado tal extremo en el momento de resolverse la cesación de
detención preventiva.

III.4.4. Sobre si las vocales demandadas cuando resolvieron la solicitud de cesación a la


detención preventiva de Erika Rodríguez Velásquez y de Rossio Aquino Rodríguez al
amparo del art. 239.1 del CPP circunscribieron su análisis en el marco de dicha norma y lo
dispuesto en el art. 398 del CPP y la jurisprudencia constitucional (expedientes 00049-
2012-01-AL y 00061-2012-01-AL)

De la compulsa de los fundamentos esgrimidos en el Auto de Vista 5/2012 (fs. 839 a 845),
pronunciado por las Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de
Oruro -ahora demandadas- que resolvió en apelación la cesación de detención preventiva de la
representada de la accionante al amparo de lo previsto en el art. 239.1 del CPP, corresponde
señalar que dichas autoridades judiciales no sujetaron su análisis a los elementos previstos en
dicha norma procesal penal en el marco de lo establecido en el art. 398 del CPP conforme se
precisó por la reiterada jurisprudencia constitucional (Fundamento Jurídico III.2), por cuanto si
bien analizaron el riesgo procesal contenido en el art. 234.8 del CPP enmarcándose en los
agravios esgrimidos por la parte apelante conforme consta en el Auto Interlocutorio 982/2011,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 102


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que demuestra que la abogada de la víctima impugnó la prueba presentada por la imputada en
sentido de que: “…la defensa no ha desvirtuado de ninguna manera los peligros procesales por
los cuales se ha dispuesto la detención preventiva de las señoras Aquino y Rodríguez tales como
el art. 234.6 y 8 del CPP, teniéndose la certeza de que ambas señoras están siendo procesadas
paralelamente por el delito de agio que tiene que ver con la venta de GLP en garrafas, por lo
que deberá compulsarse este elemento por demás importante y denegarse la solicitud de la
parte de cesación de detención preventiva” (fs. 192 vta.); sin embargo, lo hicieron sin tener
certeza de que la víctima hubiera aportado como prueba el cuaderno procesal que demuestre las
aseveraciones formuladas en su apelación incidental respecto a la existencia de una supuesta
denuncia por el delito de agio contra la imputada - ahora representante de la accionada-,
situación que fue constatada por el tribunal de garantías, lo que ciertamente da cuenta de que las
autoridades judiciales demandadas introdujeron y sustentaron su decisión en un riesgo procesal
que si bien fue discutido en el trámite de cesación de la detención preventiva y apelación que se
analiza, empero no se tenía certeza de que hubiera sido probado tal extremo en el momento de
resolverse la cesación de detención preventiva en ambas instancias.

Por lo expuesto, el Tribunal de garantías al haber concedido la acción respecto a las dos
representadas de la accionante, hicieron una evaluación parcialmente correcta de los
antecedentes y de las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de las atribuciones que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve:

1º APROBAR en parte la Resolución 01/2012 de 28 de enero, pronunciada dentro del


expediente 00049-2012-01-AL y, CONCEDER la tutela a Erika Rodríguez Velásquez respecto
de las Vocales demandadas, y DENEGAR respecto al Juez demandado.

2º APROBAR la Resolución 01/2012 de 28 de enero, dictada dentro del expediente 00061-


2012-01-AL y, por ende, CONCEDER la tutela a Rossio Aquino Rodríguez.

3º Disponer en ambos expedientes se pronuncie nueva resolución conforme a los fundamentos


de esta Sentencia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PURINACIONAL 0015/2012


Sucre, 16 marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00046-2012-01-AL

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 103


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución “03/12” de 26 de enero de 2012, cursante de fs. 14 a 15, pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Marisol Durán Ardaya en representación de
Juan Ariel Sánchez Durán contra Fernando Orellana Medina, Juez Tercero de Instrucción
en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 25 de enero de 2012, cursante a fs. 6 y vta., la accionante, señaló lo
siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra su hijo y representado, por el
supuesto delito de robo, éste se encontraría detenido de manera ilegal, por cuanto el Juez -ahora
demandado- dispuso su detención preventiva el 29 de septiembre de 2009, sin emitir una
fundamentación legal, además que hasta la fecha de la presentación de esta acción, los
memoriales de solicitud de cesación formulados posteriormente no hubieran sido respondidos,
provocando con ello su detención más allá de lo previsto por ley.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Sin especificar los derechos lesionados, cita los arts. 22, 23 “Inc. 1.3 4”, 115, 179, 180 y 256
“Inc.3” de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

La accionante no formuló una petición concreta en el memorial de la acción de libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 26 de enero de 2012, en presencia de la accionante asistida de


su abogado patrocinante y de la autoridad demandada; ausente el representante del Ministerio
Publico, según consta en acta cursante de fs. 12 a 13 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante, mediante su abogado, reiteró lo manifestado en el memorial de la acción e


insistiendo en sus fundamentos, señaló que el detenido no fue oído oportunamente, lo que
provocó su detención más allá de lo razonable, al haber solicitado en varias oportunidades la
cesación de su detención preventiva, a efecto de que pueda asumir defensa; sin embargo, la
autoridad demandada sin justificativo alguno, no habría considerado su petición.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Tercero de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz,
en audiencia señaló lo siguiente: a) En la fecha señalada por la parte accionante -septiembre de
2011-, se encontraba con Secretario suplente, siendo por ello que procuró ubicar en archivos la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 104


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

copia del acta y del mandamiento relacionado con la detención del representado de la
accionante, desconociendo el memorial que habría sido presentado el mes de septiembre; y, en
caso de ser evidente su formulación, considera que era correcto pedir “una cesación a la
detención preventiva” y reponer el acta de audiencia que estaría extraviada; b) Los sujetos
procesales tienen la posibilidad de hacer uso de la cesación cuando ha “mejorado” su situación
jurídica o por el transcurso del tiempo; en el caso presente, habiendo cumplido más de dieciocho
meses, dicha situación puede ser denunciada por la parte afectada; y, c) El imputado no se
encontraba detenido ilegalmente, por cuanto la inexistencia física del cuaderno y del acta, no
implica que la restricción a la libertad sea ilícita, ya que la gobernación no recibe detenidos sin
ninguna orden del juez; en todo caso, debía demandarse al gobernador si no existía una orden de
detención preventiva.

I.2.3. Resolución

El Juez Quinto de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, constituido
en Juez de garantías, pronunció la Resolución 03/12 de 26 de enero de 2012, cursante de fs. 14 a
15, por la que concedió la tutela, disponiendo que el Juez ahora demandado considere y resuelva
la solicitud de cesación de la detención preventiva en el término de cuarenta y ocho horas;
llamando la atención a esta autoridad, por el descuido y negligencia en el manejo y tratamiento
de los casos sometidos a su conocimiento, ordenando además la remisión de los antecedentes al
órgano disciplinario del Consejo de la Magistratura para establecer las responsabilidades,
conforme se evidencia a fs. 15 y vta. El fundamento de esta Resolución, radica en que el
imputado representado por la accionante, mediante memorial presentado el 28 de septiembre de
2011, solicitó al Juez Tercero demandado, la cesación de su detención preventiva; pretensión
que, hasta “el día de hoy” -es decir, luego de tres meses y veintiocho días- no fue resuelta por la
autoridad demandada, por lo cual se habría incumplido el art. 132 del Código de Procedimiento
Penal (CPP) y vulnerado el derecho del imputado al debido proceso, al estar su solicitud de
cesación a la detención preventiva vinculada al derecho a la libertad, provocando con tal dejadez
una demora o dilación indebida en su detención.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. A fs. 4, cursa el certificado de permanencia y conducta, expedido por la Dirección del
Establecimiento Penitenciario de “Palmasola”, cuyo contenido refiere que Juan Ariel Sánchez
Durán, ingresó por tercera vez a ese penal el 1 de octubre de 2009, con mandamiento de
detención preventiva ordenado por el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, ahora demandado,
dentro del proceso penal seguido en su contra por el delito de robo agravado, permaneciendo
hasta el 17 de noviembre de 2011, por más de dos años, un mes y dieciséis días.

II.2. El representado de la accionante, mediante memorial de 28 de septiembre de 2011, solicitó


al Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, la cesación de su detención preventiva, tal como se
evidencia del memorial con cargo electrónico de recepción de esa fecha y que cursa a fs. 5.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, considera lesionado el derecho a la libertad de su representado, por cuanto


habiendo solicitado la cesación de su detención preventiva, el Juez demandado no atendió dentro
de plazo razonable su pedido, provocando una dilación injustificada respecto a la restricción de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 105


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la libertad de Juan Ariel Sánchez Durán. En consecuencia, corresponde en revisión verificar si


tal extremo es evidente a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y alcances de la acción de libertad

El ámbito de protección de la acción de libertad, se amplía inclusive a la vida, amenazada a


consecuencia de la privación o restricción del derecho fundamental a la libertad, conforme
sustenta el art. 125 de la CPE, que indica: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

De dicho precepto constitucional, se infiere su triple carácter tutelar: preventivo, correctivo y


reparador, reforzándose como una acción de defensa oportuna y eficaz, cuya finalidad es
resguardar y proteger los derechos a la vida y la libertad, tanto física, como de locomoción, a
favor de toda persona que creyere estar ilegalmente perseguida o indebidamente procesada o
privada de libertad; en este contexto normativo, su carácter preventivo responde a frenar una
lesión ante una inminente detención indebida o ilegal, impidiendo que se materialice la
privación o restricción de libertad; el carácter correctivo, tiene por objeto evitar se agraven las
condiciones de una persona detenida, ya sea en virtud de una medida cautelar o en cumplimiento
de una pena impuesta en su contra; finalmente, el carácter reparador pretende reparar una lesión
ya consumada, es decir, opera ante la verificación de una detención ilegal o indebida, como
consecuencia de la inobservancia de las formalidades legales.

III.2. Principios ético morales de la sociedad plural y principios procesales de celeridad y


dirección judicial del proceso, en el trámite de cesación de la detención preventiva

III.2.1. Sobre los principios ético-morales de la sociedad plural

De acuerdo al nuevo orden constitucional, el art. 8.I de la CPE, dentro de los principios y valores
del nuevo Estado Plurinacional de Bolivia, asume y promueve como de carácter ético-morales
de la sociedad plural, el “ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no seas flojo, no seas mentiroso ni
seas ladrón)”; máximas milenarias que fueron constitucionalizadas y resumen de manera
extraordinaria la moral que toda persona, natural o jurídica debe practicar en todas sus
actividades. En ese sentido, se hace énfasis en el principio del ama qhilla, que establece una
conducta de vida diligente que debe observar todo individuo, con mayor razón un servidor
público como es el juez, del cual debe exigirse una actitud acuciosa en la administración de
justicia, sobre todo cuando afecta a un vivir bien, así como a una vida armoniosa.

Los principios ético morales constitucionalizados: “ama qhilla, ama llulla y ama suwa”,
vinculados entre sí, constituyen directrices de obligada observancia por los servidores de justicia
cuando resuelvan derechos y garantías constitucionales, están en el deber imperativo de
impulsar, ser director y promotor del proceso, velando su desarrollo, siendo responsables de
cualquier demora por su inactividad, impulsando la nueva justicia en el nuevo Estado
Plurinacional.

III.2.2. Sobre el principio de celeridad procesal

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 106


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Con carácter previo al análisis del caso concreto, corresponde hacer una aclaración sobre la
importancia de rescatar la jurisprudencia emitida por el Tribunal Constitucional en los últimos
años, respecto a las solicitudes de cesación de la detención preventiva, considerando que el
entendimiento jurisprudencial y doctrinal asumido se mantuvo uniforme al establecer que el juez
encargado de tramitar este tipo de peticiones, debe obrar con la celeridad necesaria al
encontrarse involucrado el derecho a la libertad personal.

En ese sentido, cabe referir a la SC 0049/2010-R de 26 de abril, que respecto al tema, señaló:
“La detención preventiva, no tiene por finalidad la condena prematura, por cuanto la
presunción de inocencia, sólo es desvirtuada ante un fallo condenatorio con calidad de cosa
juzgada, y su imposición como medida precautoria está sujeta a reglas, como también su
cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no existe una norma procesal legal que
expresamente disponga un plazo máximo en el cual deba realizarse la audiencia, corresponde
aplicar los valores y principios constitucionales, previstos en el art. 8.II de la CPE, referido al
valor libertad, complementado por el art. 180.I de la CPE, que establece que la jurisdicción
ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad entre otros; motivo por el cual
toda autoridad jurisdiccional que conozca una solicitud de un detenido o privado de libertad,
debe tramitar la misma con la mayor celeridad posible, y dentro de los plazos legales si están
fijados, y un plazo razonable si no está establecido por ley. De no ser así, tal actuación
procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del detenido y en consecuencia
repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por la sola privación de
libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que necesariamente se deba
deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado oportunamente a fin de que obtenga
una respuesta positiva o negativa.

…es necesario referirse al principio de celeridad procesal consagrado como sustento de la


justicia emanada por el pueblo, tal cual dispone el art. 178.I de la CPE, que entre otras cosas:
'...impone a quien administra justicia el deber jurídico de despachar los asuntos sometidos a su
conocimiento sin dilaciones indebidas; exigencia que se hace más apremiante en aquellos casos
vinculados a la libertad personal, toda vez que tales peticiones deben ser atendidas y resueltas
de forma inmediata si no existe una norma que establezca un plazo, y si existe, debe ser
cumplido estrictamente… (SC 0987/2004-R)´” (las negrillas nos corresponden).

III.2.3. Sobre el principio de dirección judicial del proceso

Mediante el principio de dirección judicial del proceso, se infiere que la autoridad judicial queda
compelida a impulsar de oficio -cuando corresponda- el trámite de la causa, adecuar la exigencia
de las formalidades a los fines del proceso, interpretar y aplicar a las leyes según los preceptos y
principios constitucionales -con el deber imperativo de tramitar con carácter preferencial los
procesos-, expedir sentencia cumpliendo los requisitos que la misma debe contener y, en el caso
de la expedición estimativa de medidas cautelares, exigir apariencia de buen derecho (bonus
fumus iures), evitando el peligro en la demora (periculum in mora).

Siguiendo la tendencia moderna, el principio de la dirección judicial, convierte hoy en día al


juez en una autoridad dinámica y no en un simple “convidado de piedra”. Recogiendo este
postulado, la Constitución Política del Estado, en su art. 115, haciendo armonía con la doctrina,
precisa: “I. Toda persona será protegida oportuna y efectivamente por los jueces y
tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos. II. El Estado garantiza el
derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita,
transparente y sin dilaciones” (negrillas agregadas). En el mismo sentido, la Convención
Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica) en su art. 8, referido a

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 107


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

las garantías judiciales, dispone: “1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas
garantías y dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente,
independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de
cualquier acusación penal formulada contra ella…” (negrillas añadidas).

Por otra parte, el art. 168 del CPP: señala: “…el juez o tribunal, de oficio o a petición de
parte, advertido el defecto, deberá subsanarlo inmediatamente, renovando el acto,
rectificando el error o cumpliendo el acto omitido”; así, la autoridad judicial tiene una función
activa de acuerdo con el principio de dirección procesal, de tal suerte que de oficio puede dar
celeridad y adoptar las diligencias para mejor proveer, más aún cuando está de por medio la
libertad.

Al respecto, se afirma el deber del juez de impulsar de oficio los procesos, conforme a sus
facultades procesales de dirección, que guardan armonía con el principio de dirección judicial,
que se complementa con el de impulso procesal o impulso de oficio, que -a su vez- se manifiesta
en una serie de potestades que las normas confieren al juez operador, como intérprete de la
norma para conducir y hacer avanzar autónomamente el proceso, sin necesidad de petición de
parte y sin que ello signifique coartar el derecho de los sujetos procesales a dinamizar y ser los
propulsores naturales del proceso.

III.3. Análisis del caso concreto

Al efecto, en el caso analizado se constata que el representado de la accionante ingresó por


tercera vez al penal de “Palmasola” el 1 de octubre de 2009 -con mandamiento de detención
preventiva ordenado por el Juez ahora demandado-, dentro del proceso penal seguido a instancia
del Ministerio Público, por el delito de robo agravado. Posteriormente, el 28 de septiembre de
2011, el encausado solicitó a la referida autoridad judicial, señale audiencia de cesación de la
detención preventiva; sin embargo, a pesar que este memorial cuenta con cargo electrónico de
recepción (Conclusión II.2), no fue considerado por el Juez demandado, no pudiendo justificarse
este hecho con el solo argumento que no tenía conocimiento del mismo y bajo el alegato que en
esa oportunidad su juzgado se encontraba con personal en suplencia, así como que el acta y el
mandamiento de detención preventiva estarían extraviados.

A este respecto, cabe indicar que la doctrina constitucional referida a la dirección judicial del
proceso, señala el deber imperativo de los jueces de tramitar con carácter preferencial las
solicitudes que tengan de por medio el derecho a la libertad; siguiendo esta línea, la Convención
Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica) en su art. 8.1, establece
que toda persona tiene derecho a ser oída dentro de un plazo razonable y, en el mismo sentido, el
art. 115 de la CPE, garantiza el derecho al debido proceso, a una justicia pronta, oportuna y sin
dilaciones; aspectos que no fueron observados por el Juez demandado, quien no atendió en
tiempo razonable la solicitud de cesación de la detención preventiva, obviando la función activa
a la que está compelido y en virtud de la cual, le correspondía de oficio, dar celeridad y adoptar
las diligencias para mejor proveer, sobre todo al estar involucrado el derecho a la libertad; deber
omitido por la autoridad demandada, que amerita tutela a través de la acción de libertad, ante la
evidente lesión de sus derechos invocados.

De lo señalado precedentemente, se establece que el Juez demandado incumplió su deber


jurídico -como director del proceso- de tramitar la solicitud de cesación de la detención
preventiva efectuada por el representado de la accionante, en virtud a lo desarrollado en el
Fundamento Jurídico III.2.3 de esta Sentencia; con mayor razón, si en esta clase de trámites rige
el principio de celeridad procesal previsto por el art. 178 de la CPE, que exige a los operadores

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 108


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de justicia atender los asuntos sometidos a su conocimiento de manera pronta y sin dilaciones
indebidas, pretensión que se hace apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad personal
y garantías constitucionales, no pudiendo ser justificativo alguno la existencia de supuestas
irregularidades y el extravío de documentación en el juzgado a su cargo -como el memorial de
solicitud de la cesación de la detención preventiva-; siendo que, dentro del ámbito de sus
funciones, los jueces tienen la obligación de dar respuesta a todas las solicitudes realizadas ante
ellos, sin que dicho razonamiento implique necesariamente que la respuesta deba ser favorable,
sino que toda persona tiene el derecho a ser escuchada oportunamente a fin de conseguir una
respuesta positiva o negativa.

En el caso concreto -se insiste- y en aplicación del principio de ama qhilla (no seas flojo), el
Juez demandado debió atender de manera diligente la solicitud de cesación a la detención
preventiva del representado de la accionante, no pudiendo justificar su descuido con situaciones
que son de su entera responsabilidad.

Conforme al principio de dirección procesal, el juez no puede conservar una actitud pasiva, por
el contrario, debe promover justicia para todos a efecto de que los trámites se realicen lo más
rápidamente posible; ya que, en el marco de sus funciones, resulta injustificable el
desconocimiento del memorial presentado, cuando es obligación de los operadores de justicia,
efectuar un seguimiento a la labor realizada por los funcionarios judiciales a su cargo, así como
de preservar la documentación existente en sus despachos; falta de previsión que prolongó la
detención preventiva del representado de la accionante, incurriendo en una dilación indebida que
atentó contra el derecho a la libertad, razón por la cual debe concederse la tutela solicitada.

Finalmente, cabe señalar que Misael Severiche Saravia, Juez Quinto de Sentencia, en su calidad
de Juez de garantías, al llamar la atención a la autoridad demandada por el descuido y
negligencia en el manejo y tratamiento de los casos sometidos a su conocimiento, ha obrado
correctamente; del mismo modo, al disponer la remisión al Consejo de la Magistratura, de las
fotocopias autenticadas de todos los antecedentes para establecer las responsabilidades sobre la
conducta de los subalternos del Juzgado Tercero de Instrucción en lo Penal, conforme se
evidencia a fs. 15 y vta.

Por lo precedentemente señalado, el caso se encuentra dentro de las previsiones y alcances de la


acción de libertad, por lo que el Juez de garantías, al haber concedido la tutela solicitada, ha
efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y de los alcances de esta
acción.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confieren los arts. 202.6 de la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y 12.7 y
31 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º CONCEDER la tutela solicitada en los términos dispuestos por el Juez de garantías.

2º Llamar la atención al Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, por la negligencia demostrada


en la tramitación de la causa penal objeto de la presente acción. Asimismo, ratificar la
determinación del Juez de garantías de remitir antecedentes al Consejo de la Magistratura sobre
la conducta de los subalternos del Juzgado a cuyo cargo se encontraba la autoridad judicial
demandada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 109


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0016/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra. Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00060-2012-01-AL
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 03/2012 de 02 de febrero, cursante de fs. 86 a 89 pronunciada por Esteban


Monzon Muñoz y Héctor Andia Colque Jueces Técnicos del Tribunal Segundo de Sentencia
dentro de la acción de libertad interpuesta por Abad Garisto García en representación sin mandato
de Enrique Rodríguez Ledesma contra Héctor Llave Poquechoque, Fiscal de Materia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 30 de enero de 2012, cursante de fs. 22 a 28 vta., el accionante por
su representado expresó los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La orden de aprehensión de 14 de diciembre de 2011, y la providencia en la que consta que el


accionante no es parte del proceso, pronunciado el 16 de igual mes y año, señala que el Fiscal, no
podía legalmente librar la medida restrictiva en su contra ya que no tiene la calidad de imputado,
denunciado o querellado, tampoco existe ampliación de investigación hacia su persona. En la misma,
el Fiscal demandado, no precisó cual es la orden de citación que el accionante incumplió, ni
justificó la aplicación del art. 224 del Código de Procedimiento Penal (CPP).

No obstante, que el demandado arguye que el 11 de noviembre de 2011, fue notificado con la
orden de citación del 7 del mismo mes y año, librada por el Fiscal, para que se presente al
siguiente día hábil de su citación, ante el investigador asignado al caso Cleomedes Canaviri para
prestar su entrevista informativa; empero, no precisó en qué calidad se le practicó la citación.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de sus derechos de su representado a la libertad y a la locomoción,


citando al efecto los arts. 23. I y 23. III de la Constitución Política del Estado (CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 110


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicita el cese inmediato de la persecución ilegal e indebida, dejando sin efecto la orden de
aprehensión de 14 de diciembre de 2011, con costas, daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 2 de febrero de 2012 a horas 10:30, en presencia del


accionante y de la autoridad demandada así como el representante del Ministerio Público, según
consta en el acta cursante de fs. 81 a 85 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante ratifico inextenso los fundamentos vertidos en su demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad Fiscal demandada

El Fiscal de Materia demandado, Héctor Llave Poquechoque, presentó informe escrito cursante
de fs. 59 a fs. 60, puntualizando: a) El accionante no especifica o individualiza, en cual de los
presupuestos de la norma citada, basa su acción de libertad; no obstante de ello, se precisa y
establece que, no se esta poniendo en peligro la vida de nadie y menos del representado; que
ilegalmente este perseguido o este privado de su libertad; b) En relación a la orden fiscal de
aprehensión, la misma se emitió en cumplimiento de la ley, y ante el incumplimiento de esta por
parte del accionante; toda vez que, dentro de los fines y tareas investigativas que tiene un Fiscal,
no solo como director funcional de la investigación, sino como titular de la persecución penal
pública, tiene amplias facultades, para emitir ordenes de citación y requerimientos necesarios a
la investigación; c) Es por esta necesidad investigativa y ante el informe y solicitud del
investigador asignado al caso, de que se debe investigar a otras personas identificadas y que han
tenido participación en los hechos, primero a los fines de poder contar con mayores elementos
de convicción, se ha emitido la orden de citación, para que el representado del accionante preste
su entrevista informativa ante el investigador asignado al caso, conforme consta en la orden de
citación fiscal, debidamente diligenciado al respecto y que fue desobedecida; d) No obstante, al
concurrir elementos de convicción, de la existencia de ciertos ilícitos y la participación del
representado del accionante en los mismos; es mas, en mérito al informe y solicitud de
ampliación de investigación en contra de éste, se ha emitido una nueva orden de citación fiscal,
a éste para que preste declaración informativa ante el Fiscal asistido de su abogado defensor, la
cual fue desobedecida, conforme las diligencias que se adjuntan al presente; e) Se evidencia el
incumplimiento o desobediencia a la autoridad, hecho que ha dado lugar a que, se emita la orden
de aprehensión, al tenor del art. 224 y 226 del CPP; en caso de que el accionante crea que su
representado este indebidamente procesado, perseguido o privado de su libertad, debió recurrir
ante el Juez Cautelar

I.2.3. Resolución

El Tribunal Segundo de Sentencia en lo Penal del Tribunal Departamental de Chuquisaca,


constituido en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 03/2012 por la cual se concedió la
tutela solicitada, con costas, daños y perjuicios calificables en ejecución de sentencia;
disponiéndose: 1) El cese inmediato de la persecución ilegal e indebida por parte del Fiscal
Héctor Llave Poquechoque; 2) Asimismo, se deja sin efecto la orden de aprehensión emitida el
14 de diciembre de 2011 contra del representado del accionante; y, 3) la afectación a su derecho
a la libertad y libre locomoción, al no haber adecuado el fiscal sus actos al imperio de la ley

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 111


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

impuestas por los arts. 232 y 235.1) del CPP, 5 y 8 de la Ley Orgánica del Ministerio Público
(LOMP), en la emisión del mandamiento de aprehensión.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. El 7 de noviembre de 2011, se emite orden de citación dirigida a Enrique Rodriguez


Ledesma, donde se indica, acompañado de su abogado defensor, debe prestar su entrevista
informativa ante el investigador asignado al caso, practicando la diligencia personalmente al
representado del accionante (fs.4 y vta.).

II.2. El 17 de noviembre de 2011, se emite otra orden de citación, donde se indica que portando
su cédula de identidad y, acompañado de su abogado, deberá prestar su declaración informativa
y/o se proceda a acuerdos conclusivos (fs.5 y vta.), así como la citación personal efectuada el 12
de diciembre del mismo año (fs. 6 y vta.).

II.3 Cursa la orden de aprehensión de 14 de diciembre de 2011, librada por el Fiscal demandado,
contra el representado del accionante, dentro el proceso penal seguido por la presunta comisión
de los delitos de Falsedad ideológica y otros. (fs. 3).

II.4 El mismo día, el Fiscal de Materia demandado, emite la Resolución justificando la orden de
aprehensión, en sentido de que existe en su contra suficientes indicios de que es autor y participe
del delito de Falsedad Ideológica y otros (fs.71).

II.5 Mediante memorial de 14 de noviembre de 2011, Enrique Rodríguez Ledesma presenta, al


Juzgado Tercero de Instrucción en lo Penal, la nulidad de la orden de citación (fs.9) y el 28 de
noviembre del mismo mes año presenta el incidente de nulidad de citación por defectos
absolutos e insubsanables (fs.10 a 11), ambos memoriales se puede ver que no existen sus
respectivos decretos o providencias.

II.6 En fecha 22 de noviembre de 2011, el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, amplia el


inicio de investigación contra Martha, Teresa, y Teófila Saavedra Vidaurre y Gregorio Saavedra
y no así contra de Enrique Rodríguez Ledesma (fs.39).

II.7 El 15 de diciembre del mismo año el accionante, presenta memorial al Juzgado Tercero de
Instrucción en lo Penal, donde solicita se resuelva el incidente planteado, respondiendo mediante
Decreto de 16 del mismo mes y año (fs. 12 a 13).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que su representado, esta ilegal e indebidamente perseguido, al librar en


su contra orden de aprehensión, dentro del proceso penal que sigue el Ministerio Público a
denuncia de Mario Saavedra Vidaurre contra Enrique Yucra Flores y otros por la presunta
comisión del delito de Falsedad material y otros delitos, violando sus derechos a la libertad y de
locomoción. Precipitándose el Fiscal de Materia demandado en requerir una investigación por el
supuesto delito, sin que Enrique Rodríguez Ledesma tenga calidad de denunciado ni imputado,
quien además no es parte del proceso penal; planteando el incidente de nulidad de citación por
defectos absolutos. En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son
evidentes a fin de conceder o denegar la tutela impetrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 112


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.1. La acción de libertad y el debido proceso

La acción de libertad, instituida por el art. 125 de la Ley Fundamental, como una acción de
defensa, tiene la finalidad de proteger la libertad personal frente a una persecución, detención,
procesamiento o prisión ilegal o indebida, ampliando su ámbito de protección al derecho a la
vida, cuando su riesgo o amenaza se vincula a la libertad, precisando que: “Toda persona que
considere que su vida esta en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente
procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de
manera oral o escrita, por si o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante
cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitara que se guarde tutela a su vida,
cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a
la libertad.”

Según la Jurisprudencia Constitucional desarrollada a través de la SC 0011/2010-R de 6 de abril,


se estableció. que: “La acción de libertad, es una acción jurisdiccional de defensa que tiene por
finalidad proteger y/o restablecer el derecho a la libertad física y humana, y también el derecho
a la vida, si es que se halla en peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad personal,
sea disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento de las formalidades
legales y/o la remisión del caso al juez competente, la restitución del derecho a la libertad
física, o la protección de la vida misma, motivo por el cual se constituye en una acción tutelar
preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza como su
nombre lo indica, la libertad, derecho consagrado por los arts 22 y 23 de la CPE”.

III.2.De la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad cuando se activan dos o más


vías simultáneas

La acción de libertad es un medio de defensa que debe utilizarse para impugnar los actos de las
autoridades o particulares que se consideren lesivos al derecho a la libertad o a la vida; empero,
cuando el accionante no agota las vías idóneas inmediatas ante la justicia ordinaria o bien activa
de manera simultanea otras formas de reclamación, este Órgano de justicia constitucional se ve
impedido de brindar la tutela impetrada; lo que significa que en aquellos casos en los que se
omita activar el control jurisdiccional con carácter previo a la acción de libertad o cuando se lo
hizo de manera simultánea, operara de manera automática la subsidiariedad excepcional de la
acción tutelar.

Para que proceda esta acción, el impetrante de tutela, deberá considerar que previamente a su
interposición, debe usar los medios de defensa eficaces y oportunos existentes para proteger su
derecho a la libertad supuestamente lesionado, dada la naturaleza subsidiaria excepcional que la
caracteriza, desarrollada por la jurisprudencia anterior en conocimiento de los recursos de
hábeas corpus y reafirmada en vigor del nuevo modelo constitucional y la naturaleza de la
acción de libertad, a través de la SC 0008/2010-R de 6 de abril, que establece: “I. El recurso de
hábeas corpus, ahora acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz para conocer y restituir
cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a la vida, la libertad o
constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o ponga en peligro el derecho a
la libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar de existir mecanismos de
protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos resulten ser
evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de defensa, por la
urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir los derechos
afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean
idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o
procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 113


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos
afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas”.

III.3. Sobre los actos del Ministerio Público y la posibilidad de reclamarlos ante el juez
cautelar

Una vez precisada la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad y tomando en cuenta


que en el caso de análisis, el accionante alega que su representado esta perseguido ilegal e
indebidamente, denunciando actos ilícitos respecto del Fiscal de Materia, concierne citar la
jurisprudencia constitucional pronunciada en estos casos.

Según la jurisprudencia constitucional, se dejó establecido que el Juez Tercero de Instrucción en


lo Penal, conforme a los arts. 54 inc. 1) y 279 del CPP, es la autoridad encargada del control
jurisdiccional de la investigación y específicamente, de los actos del Ministerio Público y de los
funcionarios policiales, desde los actos iníciales hasta la conclusión de la etapa preparatoria,
determinando que toda persona que considere la existencia de una acción u omisión que vulnere
su derecho a la libertad dentro de la investigación, debe acudir ante el Juez cautelar para que sin
demora se pronuncie sobre la legalidad o ilegalidad de su arresto o aprehensión y ordene lo que
en derecho corresponda y sólo en caso que la supuesta lesión no se repare, se activará esta
acción tutelar.

La SC 0054/2010-R, también compatibilizó el referido entendimiento, ante una aparente


ausencia de vía idónea para conocer y resolver las irregularidades denunciadas en los casos en
que el Fiscal no hubiese informado al Juez de Instrucción en lo Penal, sobre investigaciones
iniciadas o denuncia, situaciones en las que expresó que: “…conforme estableció la SC
0997/2005-R de 22 de agosto, si el fiscal no diera aviso al juez cautelar, en un evidente
incumplimiento de sus deberes, el imputado o detenido no puede adoptar una actitud pasiva,
sino que en resguardo de sus derechos fundamentales debe exigir que se cumpla con esa
comunicación y en caso de que no se hubiese procedido de esa forma, está plenamente
facultado para acudir ante el juez cautelar para que conozca las denuncias o irregularidades en
las que hubiesen podido incurrir el Ministerio Público y los efectivos policiales, y en su caso,
pueda restablecer los derechos presuntamente vulnerados; lo que implica que, mientras exista
la posibilidad de impugnar aprehensiones o detenciones indebidas ante el juez cautelar y no se
advierta que podría existir alguna dilación indebida o injustificada que agrave la situación del
detenido al no conocer y resolver en forma oportuna su situación jurídica, dicha vía se
considera y constituye en la idónea, oportuna y eficaz para conocer esas situaciones.

…sin que sea admisible acudir en forma directa a esta acción tutelar si con carácter previo los
hechos denunciados no fueron reclamados ante la autoridad encargada del control
jurisdiccional, que es la apta para restablecer las presuntas lesiones a derechos fundamentales
y -se reitera- sólo en caso de verificarse que existirá una dilación o que esa instancia no se
constituye en la eficaz y oportuna para restablecer esos derechos, es que se abre la posibilidad
de acudir a la presente acción tutelar en forma directa”.

En ese sentido se ha pronunciado también la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, al determinar los


supuestos en los que de manera excepcional no es posible ingresar al análisis de fondo de la
acción de libertad, señalando como primer supuesto: “Si antes de existir imputación formal,
tanto la Policía como la Fiscalía cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la
libertad física o de locomoción, y todavía no existe aviso del inicio de la investigación,
corresponde ser denunciadas ante el juez cautelar de turno. En los casos en los que ya se
cumplió con dicha formalidad procesal; es decir, con el aviso del inicio de la investigación, al

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 114


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella donde se debe acudir en procura de la
reparación y/o protección a sus derechos. De no ser así, se estaría desconociendo el rol, las
atribuciones y la finalidad que el soberano a través del legislador le ha dado al juez ordinario
que se desempeña como juez constitucional en el control de la investigación”.

III.4. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el asunto de examen, resulta aplicable el razonamiento asumido por este Tribunal


desarrollado en el Fundamento Jurídico precedente. Observando que el accionante reclama
supuestos actos ilegales de parte del Fiscal de Materia.

En ese sentido, la parte accionante no puede asumir una conducta pasiva, sino reclamar los
hechos que considera ilegales en la jurisdicción ordinaria, en cumplimiento al principio de
subsidiariedad excepcional que caracteriza a esta acción de defensa. No debiendo recurrir en
forma directa a la vía constitucional, la que es viable únicamente en situaciones en las que,
impugnadas las supuestas ilegalidades, las mismas no sean reparadas por el juez ordinario.
Por lo que corresponde denegar la tutela solicitada a través de esta acción; por su naturaleza no
opera como un mecanismo subsidiario en la protección de los derechos invocados, situación que
impide realizar el análisis de fondo de la problemática planteada.

Por los fundamentos expuestos, el Tribunal de Garantías al “conceder” la acción de libertad, no


obró en forma correcta.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud


de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de
conformidad con el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión,
resuelve: REVOCAR la Resolución 03/2012 de 2 de febrero de 2012, cursante en fs. 86 a 89,
pronunciada por el Tribunal Segundo de Sentencia en lo Penal del Distrito Judicial de Chuquisaca; y,
en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada. Con la aclaración que no se ingreso al análisis de
fondo en el presente caso.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0017/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00034-2012-01-AL
Departamento: La Paz

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 115


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución 0002/2012 de 24 de enero, cursante de fs. 59 a 63, pronunciada dentro de


la acción de libertad interpuesta por María Irma Tórrez de Tapia en representación sin mandato
de Marco Antonio Tapia Tórrez contra Carlos Blanco Quisbert y Nancy Bustillos de
Altuzarra, Jueces Técnicos del Tribunal Quinto de Sentencia del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 20 de enero de 2012, cursante de fs. 2 y vta. de obrados, la accionante
María Irma Tórrez de Tapia manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Su representado se encuentra recluido en el penal de “San Pedro” por más de un año, posterior a haber
atravesado un proceso de asistencia familiar que ya fue resuelto.

El proceso penal por el delito de estafa seguido contra su hijo y representado por “Norah Tórres
Vargas”, fue dirimido en el Tribunal Cuarto de Sentencia, en el que anulándose obrados y no
pudiéndose conformar tribunal con jueces ciudadanos, pasó al Tribunal Séptimo de Sentencia. Al
haberse aplicado a su hijo una medida cautelar económica por Bs25 000.- (veinticinco mil
bolivianos) y depositada dicha suma ante el Consejo de la Judicatura el 31 de diciembre de 2011,
se solicitó a este último Tribunal, se le extienda mandamiento de libertad, existiendo una inminente
retardación de justicia, ya que su hijo se encuentra injusta e ilegalmente detenido.

I.1.2 Derechos supuestamente vulnerados

La accionante estima como vulnerados los derechos de su representado a la libertad y “libre


locomoción”, sin indicar la norma constitucional que los contiene.

I.1.3 Petitorio

Solicita se conceda la acción y se disponga la inmediata libertad de su representado por estar


indebidamente detenido.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 24 de enero de 2012, según consta en el acta de fs. 52 a 58 de


obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, en audiencia ratificó y amplió los términos expuestos en su demanda de
acción de libertad, indicando que en la audiencia de consideración de revocatoria y modificación
de medidas cautelares, el Presidente del Tribunal de Sentencia Cuarto, convocó al Juez Técnico del
Tribunal Quinto de Sentencia de la ciudad de La Paz, Carlos Blanco Quisbert, y a raíz de ello surge
una denuncia por prevaricato; así como también solicita recusación contra Nancy Bustillos de
Altuzarra Juez técnico del Tribunal Quinto de Sentencia, con el fin de evitar la firma del
mandamiento de libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 116


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Al no conformarse el Tribunal Cuarto de Sentencia, se remitió lo obrado al Tribunal Quinto de


Sentencia, donde se realizó la citación a jueces ciudadanos y una vez elevado el proceso a este
Tribunal, “Nora” Torrez Vargas interpone recusación contra éste, siendo rechazada la misma.

Cursa una verificación del domicilio de Marco Antonio Tapia Torrez, trámite para que se libre
mandamiento de libertad y por decreto de 18 de enero de 2012, se ordena se expida el mismo en
favor del acusado, cumplidas que fueron las formalidades.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Nancy Bustillos de Altuzarra, Jueza Técnica del Tribunal Quinto de Sentencia, en audiencia informó lo
siguiente: a) Aclaró previamente que es parte del Tribunal Quinto de Sentencia; b) Se dispuso se expida
el mandamiento de libertad y al no cumplirse las formalidades legales, hubo reconstitución de Tribunal;
c) La querellante volvió a presentar recusación “por la cual se le volvió a rechazar por causal
sobreviniente que habríamos expedido un Mandamiento de Libertad”; y, d) Al excusarse el “doctor
Blanco” Juez Técnico del Tribunal Quinto de Sentencia, el mandamiento de libertad únicamente fue
firmado por su persona y para evitar futuras impugnaciones u observaciones, ordenó se convoque a un
miembro del Tribunal Sexto de Sentencia, que no sabe si estará de acuerdo y firmará el mismo.

Por su parte, el codemandado, también en audiencia informó que conocida la revocatoria solicitada
por la querellante y rechazada ésta, cumplidas las formalidades su colega como Presidente ordena
expedirse mandamiento de libertad pasándose por Secretaría las notificaciones; además, indica que
no se dejó sin efecto el decreto de radicatoria y con el fin de no entorpecer el trámite se allanó para
que se convoque a uno de los jueces técnicos para conocer los actos preparatorios.

I.2.3. Resolución

La Jueza Segunda de Sentencia en suplencia legal de su similar Primero, por Resolución


0002/2012 de 24 de enero, cursante de fs. 59 a 63, concedió la acción de libertad, con el
fundamento de que el accionante cumplió con la fianza dispuesta por el Tribunal Cuarto de
Sentencia y desde el 18 de febrero, se encuentra indebidamente detenido en razón de haber
cumplido con las medidas dispuestas por ese Tribunal; además, dispuso que sea un miembro del
Tribunal Sexto de Sentencia, que fue convocado por la Presidenta del Tribunal Quinto de
Sentencia, quien suscriba el mandamiento de libertad, por la excusa emitida por Carlos Blanco
Quisbert, Juez del Tribunal Quinto de Sentencia.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En vigencia de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se realizó el sorteo del presente
proceso el 15 de febrero de 2012, por lo que el pronunciamiento de la sentencia se encuentra dentro
de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público y acusación particular de Nora
Tórrez Vargas contra Marco Antonio Tapia Tórrez y Daniela Tapia Vargas, por la supuesta
comisión de los delitos de estafa y estelionato, una vez realizada la audiencia de consideración de
medidas cautelares el 7 de enero de 2011 (fs. 28 a 33 vta.), el Tribunal Cuarto de Sentencia, dictó

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 117


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

el Auto Interlocutorio 01/2011 de 7 de enero, disponiendo la libertad del representado de la


accionante, bajo medidas sustitutivas a la detención preventiva (fs. 33 vta. a 37),

II.2. En audiencia de consideración de revocatoria y de modificación de medidas cautelares de 22


de octubre de 2011 (fs. 39 a 42 vta.), el Tribunal Cuarto de Sentencia dictó el Auto Interlocutorio
12/2011 de 22 de octubre, rechazando la solicitud de revocatoria planteada por la parte acusadora
particular y fiscal; también, la solicitud de modificación o sustitución de fianza planteada por el
accionante (fs. 42 vta. a 46).

II.3. Por Resolución 01/2011 de 7 de enero, se fija una fianza económica de Bs25 000.-
(veinticinco mil bolivianos), para cada uno de los imputados (fs. 33 vta. a 37) y de obrados se
evidencia la existencia del Certificado de Depósito Judicial 150645, por Bs25 000.-, realizado
por “Jose Luuis Tapia Tórrez” el 17 de enero de 2011 (fs. 47).

II.4. Por la excusa de Carlos Blanco Quisbert Juez Técnico del Tribunal Quinto de Sentencia, por
Auto de 16 de enero de 2012, se convocó a uno de los Jueces Técnicos del Tribunal Sexto de
Sentencia (fs. 49 a 50).

II.5. El accionante mediante memorial solicita se le extienda mandamiento de libertad, y por


decreto de 18 de enero de 2012, la Presidenta del Tribunal Quinto de Sentencia dispone, cumplidas
las formalidades de ley, se expida mandamiento de libertad, a favor del acusado Marco Antonio
Tapia Tórrez (fs. 48 y vta.).

II.6. Por decreto de 19 de enero de 2012, la Presidenta del Tribunal Quinto de Sentencia, indicó
que en conocimiento del proceso se dio paso al trámite de cumplimiento de resolución de cesación
de detención preventiva y “no ha sido este Tribunal el que ha concedido el beneficio de la
Libertad”, correspondiendo dar cumplimiento a una resolución pronunciada por el Tribunal que en
su momento tenía el conocimiento de la causa (fs. 51 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

La representante sin mandato estima como vulnerados los derechos del accionante a la libertad y
“libre locomoción”, debido a que su hijo se encuentra injusta e ilegalmente detenido, a pesar de
haber solicitado, al Tribunal de Sentencia, la extensión del correspondiente mandamiento de
libertad, existiendo una inminente retardación de justicia. En consecuencia, corresponde en
revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad: Finalidad y alcances

La acción de libertad es una de las acciones de defensa que contempla la Constitución Política del
Estado, instituida en el art. 125, que tiene por finalidad garantizar la protección de los derechos a la
vida y a la libertad, que podrá interponerse por toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal.

La jurisprudencia desarrollada por el Tribunal Constitucional, estableció a través de la SC


0011/2010-R de 6 de abril, que: “La acción de libertad, es una acción jurisdiccional de defensa
que tiene por finalidad proteger y/o restablecer el derecho a la libertad física o humana, y también
el derecho a la vida, si es que se halla en peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad
personal, sea disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento de las
formalidades legales y/o la remisión del caso al juez competente, la restitución del derecho a la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 118


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

libertad física, o la protección de la vida misma, motivo por el cual se constituye en una acción
tutelar preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza como su
nombre lo indica, la libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE”.

En ese entendido, la Constitución Política del Estado “es más amplia en cuanto a su ámbito de
protección, pues se extiende al derecho a la vida, la libertad física o personal, el debido proceso,
en lo que se refiere al procesamiento indebido y la libertad de locomoción, esta última dada la
íntima relación que existe con el derecho a la libertad física, según la interpretación extensiva
realizada por la SC 0023/2010-R de 13 de abril” (SC 1211/2011-R de 13 de septiembre).

La acción de libertad, es una garantía constitucional, que se constituye en un instrumento de


defensa o de protección, contra las lesiones al derecho a la libertad; además, de ejecutarse a través
de un procedimiento constitucional sumarísimo, por lo que el constituyente otorgó a cualquier
persona este medio de defensa directo, sencillo, eficaz y oportuno, para restituir los derechos a la
libertad física o personal y de locomoción que hubieren sido vulnerados.

III.2. La acción de libertad traslativa o de pronto despacho

El Tribunal Constitucional en la SC 1579/2004-R de 1 de octubre, concluyó que el recurso de


hábeas corpus -actualmente acción de libertad- “…por violaciones a la libertad individual y/o
locomoción, puede ser reparador si ataca una lesión ya consumada, preventivo si procura impedir
una lesión a producirse o correctivo si intenta evitar que se agraven las condiciones en que se
mantiene a una persona detenida”.

En ese entendido, el Tribunal Constitucional en la SC 0465/2010-R de 5 de julio, en su


Fundamento Jurídico III.3 concluyó que: “…los tipos de hábeas corpus precedentemente aludidos,
también pueden ser identificados en la nueva Ley Fundamental, e inclusive ampliados. Así dentro
de la tipología desarrollada por la jurisprudencia del Tribunal Constitucional citada líneas
precedentes, se agregó el hábeas corpus restringido, el hábeas corpus instructivo y al hábeas
corpus traslativo o de pronto despacho (SC 0044/2010-R de 20 de abril).

Conforme la doctrina constitucional sentada por este Tribunal, por medio del hábeas corpus
traslativo o de pronto despacho, se busca acelerar los trámites judiciales o administrativos
cuando existen dilaciones indebidas, para resolver la situación jurídica de la persona que se
encuentra privada de libertad” (las negrillas son nuestras).

Siguiendo con el entendimiento jurisprudencial desarrollado por la citada SC 0465/2010-R, en su


Fundamento Jurídico III.4 señaló: “Para la concreción del valor libertad, el principio celeridad y
el respeto a los derechos, se ha previsto una acción de defensa específica que coadyuve para que
los mismos no se vean afectados por actos lesivos y en caso de que así fuera, se puedan restituir a
su estado natural, en especial tratándose de derechos fundamentales…”.

En ese sentido, en el mismo Fundamento Jurídico citado en el párrafo anterior agregó a la


tipología, el hábeas corpus -ahora acción de libertad- traslativo o de pronto despacho: “…el cual se
constituye en el mecanismo procesal idóneo para operar en caso de existir vulneración a la
celeridad cuando esté relacionada a la libertad y devenga de dilaciones indebidas, que retardan o
evitan resolver la situación jurídica de la persona que se encuentra privada de libertad”.

III.3. La celeridad en las actuaciones procesales

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 119


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El constituyente ha previsto principios procesales específicos en los cuales se fundamenta la jurisdicción


ordinaria, así se tiene el art. 178.I de la Constitución Política del Estado (CPE), que dispone que la
potestad de impartir justicia emana del pueblo boliviano y se sustenta entre otros principios, en el de
celeridad, norma constitucional concordante con el art. 180.I de la CPE, que determina que dicha
jurisdicción se fundamenta también en los principios procesales de eficacia, eficiencia y celeridad, entre
otros.

La jurisprudencia constitucional, contenida en la SC 1072/2005-R de 5 de septiembre, ha


establecido que:”…los fiscales, autoridades judiciales o administrativas, debe atender las
solicitudes y trámites en los que esté de por medio el derecho a la libertad, con la inmediatez
necesaria, dentro de un plazo razonable, con la finalidad de que la situación jurídica de las
personas, dado el derecho primario que se encuentra amenazado o restringido, pueda ser definida
sin dilaciones indebidas” (las negrillas son propias).

Entendiéndose que en todo trámite judicial, específicamente en el procedimiento penal, toda


solicitud en la que se encuentre involucrado el derecho a la libertad física o personal, debe
tramitarse con la mayor celeridad posible o dentro de un plazo razonable.

Tratándose de las solicitudes de cesación de detención preventiva y su ejecución a través de la


expedición del respectivo mandamiento de libertad, en las que se encuentra de por medio el derecho a la
libertad, debe tener un trámite diligente y oportuno, caso contrario podría provocarse una restricción
indebida de este derecho, observando que la detención preventiva, no tiene como fin una condena
prematura, y que si bien no existe una norma procedimental que determine el plazo máximo en el que se
debe efectuar la consideración de dicho pedido, prima el principio de celeridad procesal.

III.4. Respecto a la Presidenta del Tribunal de Sentencia demandado

La representante sin mandato, a través de la presente acción de libertad, denunció que se vulneró el
derecho del accionante a la libertad, debido a que las autoridades demandadas incurrieron en
retardación de justicia, ya que al haberse dictado un decreto por el cual se ordenó se expida el
mandamiento de libertad a favor de su hijo y habiéndose cumplido las formalidades de Ley, el
mismo no se libró, por lo cual se encuentra injusta e ilegalmente detenido.

De la revisión a los antecedentes que informan la presente acción de libertad, se tiene que el
accionante presentó la misma el 20 de enero de 2012 denunciando los hechos aludidos supra, ante
la evidente falta de celeridad demostrada por parte de Nancy Bustillos de Altuzarra, Presidenta del
Tribunal Quinto de Sentencia, en el diligenciamiento del correspondiente mandamiento de libertad,
argumentando ésta, que el Juez Técnico Carlos Blanco Quisbert, al haberse excusado del
conocimiento de la causa ya no puede firmar, por lo que el respectivo mandamiento está
únicamente suscrito por su persona y que esta circunstancia podría generar un defecto que daría
lugar a nuevas impugnaciones u observaciones, siendo ese el motivo por el que ordenó se
convoque a un miembro del Tribunal Sexto de Sentencia, sin embargo no se alcanzó a notificar al
correspondiente juez técnico; además, de alegar no saber si estará de acuerdo y firmará el
mandamiento.

La Jueza demandada, demoró injustificadamente el trámite del mandamiento de libertad en favor


del accionante, pues si bien por decreto de 18 de enero de 2012, decidió ordenar su libramiento,
cumplidas que fueron las formalidades, firmando únicamente ella ese actuado procesal, con
relación al respectivo libramiento del mandamiento extrañado le dió un tratamiento diferente, al
creer necesaria la firma de otro juez técnico, pese al deber que tenía de obrar con celeridad por
tratarse de la libertad de una persona; sin embargo, mantuvo indebidamente en detención

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 120


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

preventiva al accionante por dos días más, hasta que éste no tuvo otro remedio que activar la vía
constitucional para poder obtener protección a su derecho vulnerado, situación agravada si se
considera que hasta la celebración de la audiencia de acción de libertad en fecha 24 de enero,
todavía no se efectivizó la libertad dispuesta.

Por otra parte, en tribunales penales colegiados independientemente a si un mandamiento de


libertad debe estar firmado por el Presidente, los jueces técnicos o todo el tribunal aspecto que se
determinará atendiendo a las particularidades y realidad de cada Distrito Judicial y la coordinación
entre los órganos jurisdiccionales, penitenciarios y policiales debe dejarse claramente establecido
que en los casos en los que habiéndose decidido y dispuesto por el tribunal colegiado la
libertad de un detenido preventivo, la firma en el mandamiento de libertad de uno sólo de los
jueces técnicos al constituir el mismo una formalidad que instrumentaliza dicha decisión, es
suficiente cuando por razones de excusas o recusaciones no pueda actuarse con la debida
celeridad y pueda entorpecerse la efectividad de dicho mandamiento, esto porque:

1) El tratamiento que debe darse a las solicitudes en las que se encuentre de por medio el derecho a
la libertad, entre ellas, la cesación de la detención preventiva, debe tener un trámite acelerado y
oportuno, pues de no hacerlo podría provocarse una restricción indebida de este derecho, no
debiendo existir demora o dilación indebida en su tramitación que impidan que este beneficio sea
efectivo de forma inmediata;

2) En todo caso la autenticidad de un mandamiento de libertad debe verificarse por las autoridades
administrativas penitenciarias, así se tiene establecido en la SC 0323/2003-R de 17 de marzo, que
señaló:“…el deber jurídico que recae sobre la Gobernación de la Cárcel, de tomar las debidas
previsiones para evitar que alguien pueda ser puesto en libertad teniendo otros mandamientos
pendientes o que el mandamiento de libertad pueda contener alguna falsedad material o
ideológica, lo cual le impele a tener que verificar y solicitar la información pertinente y revisar
previamente los registros antes de dar curso al mandamiento”.

En razón a ello, la autoridad codemandada en su condición de Presidenta del Tribunal Quinto de


Sentencia, ante la excusa del Juez Técnico, Carlos Blanco Quisbert, por la causal contenida en el
art. 316 inc. 11) del Código de Procedimiento Penal (CPP), que conformaba el Tribunal, no debió
supeditar la efectivización del mandamiento de libertad a la firma en dicho mandamiento del juez
suplente si era previsible que dicho trámite demoraría.

III.5. Falta de legitimación pasiva de la autoridad codemandada

La SC 0039/2010-R de 20 de abril, estableció que para la procedencia de la acción de libertad


“…es ineludible que el recurso sea dirigido contra el sujeto que cometió el acto ilegal o la omisión
indebida, o contra la autoridad que impartió o ejecutó la orden que dio lugar a la persecución,
aprehensión, detención, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales; su inobservancia
neutraliza la acción tutelar e impide a este Tribunal ingresar al análisis de fondo de los hechos
denunciados, ello debido a la falta de legitimación pasiva…” .

En el caso que nos ocupa, el Juez Técnico Carlos Blanco Quisbert, presentó excusa del
conocimiento de la causa, antes de la emisión del decreto que ordena la expedición del
mandamiento de libertad en favor del accionante, por esta razón no suscribió la orden de libertad,
ni omitió ejecutar la misma, por no estar ya en el conocimiento de la causa, por lo que respecto a
dicho demandado no se presenta la coincidencia que tiene que darse entre la autoridad que
presuntamente causó la violación a los derechos y aquella contra quien se dirige la acción, por lo

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 121


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tanto no corresponde otorgar la tutela por carecer de legitimación pasiva para ser demandado en el
presente caso.

En consecuencia la Jueza de garantías al conceder la acción tutelar, aunque con diferente


fundamento, obró correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de las atribuciones que le confiere
la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve:

1º CONCEDER la tutela solicitada sólo con relación a Nancy Bustillos de Altuzarra y


DENEGAR respecto al codemandado Carlos Blanco Quisbert, ambos Jueces del Tribunal Quinto
de Sentencia.

2º Llamar la atención a la Jueza de garantías, por la demora en el señalamiento y realización de la


audiencia, en incumplimiento del art. 126.I de la CPE y el art. 68 de la LTCP y al evidenciarse la
mala redacción del acta de audiencia se exhorta para en el futuro tenga mayor cuidado en la
celebración de dicho actuado procesal.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0018/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00066-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 26 de enero de 2012, cursante a fs. 46 a 48, pronunciada dentro de


la acción de libertad interpuesta por Eduardo Fernández Ramos y Luis César Fernández
Ramos contra José Mercado Morales y Gualberto Díaz Guzmán, Gobernadores de los
Recintos Penitenciarios El Abra y San Sebastián Varones, respectivamente.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 25 de enero de 2012, cursante de fs. 14 a 16, los accionantes
interponen acción de libertad, bajo los siguientes fundamentos de hecho y derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 122


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Dentro el proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Eduardo Fernández Ramos y
Luis César Fernández Ramos, a denuncia del Banco BISA S.A., por la presunta comisión de los
delitos de manipulación informática y estafa, los accionantes manifiestan cumplir detención
preventiva por expresa orden de la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal del entonces
Distrito Judicial de Cochabamba, en los recintos penitenciarios de El Abra y San Sebastián
Varones, respectivamente. La referida autoridad ejercitó el control de la investigación; sin
embargo, por Resolución 798/2011 de 25 de noviembre, el Juez Quinto de Instrucción en lo
Penal de El Alto (en suplencia legal del Juzgado Primero de Instrucción en lo Penal de La Paz),
dispuso la acumulación del proceso (radicado en el Distrito Judicial de Cochabamba) a este
juzgado, ordenando la inhibitoria y estableciendo la remisión del cuaderno procesal más los
imputados, al juzgado declarado competente por razón de territorio (Primero de Instrucción en
lo Penal de La Paz).

Notificada con esta determinación, la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal, aceptó la


inhibitoria y dispuso la remisión del legajo procesal, mas no así, de los imputados, con el
argumento que esta autoridad al haber perdido competencia no tendría facultad para ordenar el
cambio del lugar donde deben cumplir la medida cautelar impuesta.

Ante la negativa de la Jueza cautelar, los accionantes acudieron al Juez Primero de Instrucción
en lo Penal de La Paz, quien ordenó se cumpla con el traslado de los imputados a es ciudad; sin
embargo, pese a tener conocimiento de dicha determinación, los funcionarios demandados
señalaron que “no pueden hacer caso a una orden de un juez de la ciudad de La Paz” (sic),
manifestando que debió ser la Jueza del Distrito Judicial de Cochabamba, quien emita esta orden
de traslado. De esta manera -según los accionantes- los demandados incumplieron una orden
judicial expresa, dilatando injustificadamente el traslado y ocasionando una severa lesión al
derecho a la libertad, citando al efecto la SC 1243/2011-R de 16 de septiembre.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Los accionantes, estiman vulnerado su derecho a la libertad, sin citar norma constitucional
alguna.

I.1.3. Petitorio

Los accionantes no hacen un petitorio preciso, respecto a la tutela demandada.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 26 de enero de 2012, en presencia de los accionantes -sin


patrocinio legal- y de los funcionarios demandados; ausente el representante del Ministerio
Público, según consta en el acta cursante de fs. 45 a 46, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

Los accionantes, haciendo uso de la defensa material, en lo esencial solicitaron el “traspaso” a la


ciudad de La Paz, toda vez que el trámite de traslado se gestiona desde hace un mes; señalaron
que no es culpa de los funcionarios demandados; empero, por error de los jueces no se dio
cumplimiento a lo ordenado, por lo que se vieron obligados a promover la presente acción
tutelar, puesto que se aproxima su audiencia en La Paz, y ante su ausencia, es previsible que se
suspenda, lo cual les causará perjuicio de sobremanera.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 123


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.2. Informe de los funcionarios demandados

Gualberto Díaz Guzmán, Gobernador del Recinto Penitenciario de San Sebastián, en audiencia,
señaló: a) El accionante Luis Cesar Fernández Ramos fue detenido preventivamente el 22 de
julio de 2011, por orden de la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal, Rosario Butrón Vildoso,
por la presunta comisión de los delitos de estafa y manipulación informática; b) El 20 de
diciembre de ese año, tomaron conocimiento de la orden que dispuso la inhibitoria y la
acumulación del proceso radicado en Cochabamba, al Juez Primero de Instrucción en lo Penal
de La Paz, disponiendo la remisión del legajo procesal. Ese mismo día, los padres de los
imputados y ahora accionantes, se apersonaron a ambos centros penitenciarios para efectuar el
traslado; empero, en esa ocasión explicaron que no era una orden de traslado, de lo contrario, se
trataba de una resolución que disponía la remisión del cuaderno procesal a la autoridad
competente de esa ciudad; c) El 16 de enero de 2012, recibieron una nueva notificación con una
orden instruida y un oficio dirigido a la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal, por parte del
“Dr. Carlos Guerrero”, adjuntando un mandamiento de detención preventiva, cuya resolución en
su parte más importante, señala que de conformidad con lo dispuesto por los arts. 16 y 17 del
Código de Procedimiento Penal (CPP), se declara probada la excepción de incompetencia en
razón de territorio, disponiendo la inhibitoria del proceso y ordenándose la remisión del
cuaderno procesal más los detenidos a la ciudad de La Paz, exhortando la notificación mediante
orden instruida; sin embargo, -a decir de la autoridad que brinda el informe-, esta determinación
no resulta ser una orden expresa para efectuar el traslado de los detenidos, puesto que tenía la
finalidad de poner dicha Resolución a su conocimiento y de su similar Gobernador del Recinto
Penitenciario de El Abra, por lo que concertaron una reunión con los padres de los imputados,
puesto que la autoridad jurisdiccional declarada incompetente se negó a firmar la orden de
traslado. Ante la negativa del Presidente de la entonces Corte Superior de Justicia de conceder
audiencia, acudieron a la Jueza de Ejecución Penal, a fin que se pueda oficiar la orden de
traslado; empero la Jueza de Instrucción Cautelar se negó; d) Posteriormente, el 20 de enero del
presente año, pusieron en conocimiento de los funcionarios accionados un decreto y un oficio
firmado por el Juez Primero de Instrucción “Carlos Guerrero”, adjuntando una orden instruida y
el mandamiento de detención preventiva, indicando se libren las notificaciones correspondientes
para estas autoridades; sin embargo, tampoco resultó ser una determinación expresa para
trasladar al recinto penitenciario de La Paz; a cuya consecuencia, las autoridades demandadas
oficiaron a la Jueza de Instrucción Cautelar, solicitando el traslado de los accionantes, fundando
esta petición en los arts. 2, 4 y 18 de la Ley de Ejecución Penal y Supervisión (LEPS), así como
en los arts. 47 y 48 de su Reglamento; por lo que, según los funcionarios demandados, no
pusieron en peligro la vida de los accionantes, solo cumplen una disposición emanada de una
autoridad competente, señalando, que en todo caso la autoridad accionada debía ser la Jueza
cautelar, por negarse a firmar una orden de traslado.

José Mercado Morales, Gobernador del Recinto Penitenciario de El Abra, en audiencia reiteró
los mismos antecedentes que fueron referidos por el Gobernador del Recinto Penitenciario de
San Sebastián Varones, con la aclaración que las notificaciones efectuadas el 16 y 20 de enero
de 2012, sólo fueron con la parte resolutiva de las aludidas resoluciones, por lo que ambos
funcionarios enviaron una nota a la Autoridad Judicial de Cochabamba para que autorice el
traslado a la ciudad de La Paz, sin que en ningún momento se hubiera lesionado el derecho a la
libertad de los accionantes, al contrario, están prestando su colaboración, resultando necesario
que la Jueza cautelar se pronuncie respecto a la efectividad del traslado.

I.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 124


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Cochabamba, constituida en Tribunal de


garantías, dictó la Resolución de 26 de enero de 2012, cursante de fs. 46 a 48, por la que denegó
la acción de libertad, con los siguientes fundamentos: i) Tanto los antecedentes del caso
concreto, así como los informes de los funcionarios demandados, dan cuenta que existe una
disposición de acumulación del proceso expedida en el Distrito Judicial de La Paz de inhibitoria
del proceso y remisión de los actuados procesales -más los detenidos- ante el Juez Primero de
Instrucción en lo Penal de esa capital, tal cual consta en la orden instruida con la que hubiere
sido notificada la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal de Cochabamba; no obstante, dispuso
la remisión de los antecedentes del cuaderno procesal y no así el traslado de los accionantes,
limitándose a informar que los mismos cumplen detención preventiva en mérito a las
Resoluciones de 17 y 22 de julio de 2011, en las cárceles de “El Abra” y “San Sebastián
Varones”, respectivamente; asimismo, puso las ordenes instruidas en conocimiento de las
autoridades accionadas, sosteniendo que al haberse inhibido del conocimiento de la causa, no
resulta ser llamada por ley para disponer el traslado. Posteriormente, por Resolución de 9 de
enero de 2012, el Juez de Instrucción en lo Penal del Distrito Judicial de La Paz, determinó que
su similar de Cochabamba, oficie el traslado de los detenidos a la ciudad de La Paz, a cuya
consecuencia, por decreto de 20 de enero 2012, esta última autoridad nombrada se limitó poner
en conocimiento las órdenes instruidas a los funcionarios demandados, sin exhortar
expresamente el traslado de los detenidos, a fin de que los mismos ejerciten su derecho a la
defensa en el lugar donde se encuentran los antecedentes del cuaderno procesal; ii) De lo
anterior, se colige que la acción tutelar no está adecuadamente dirigida, conforme el tenor de la
SC 392/2010-R de 23 de junio, al advertirse que la legitimación pasiva no se encuentra
adecuadamente direccionada, puesto que los funcionarios “denunciados” debían recibir una
orden clara e inequívoca por parte de las autoridades; en ese orden, el Tribunal Constitucional a
través de su amplia jurisprudencia, dejó sentado que cuando esta acción se dirige por error ante
una autoridad diferente que causó la lesión, pero de la misma institución, rango o jerarquía e
idénticas atribuciones, es posible conceder la tutela no obstante de ese error, citando al efecto la
SC 0691/2001-R de 9 de julio; y, iii) En el presente caso, los funcionarios demandados forman
parte de la Policía Boliviana y no corresponden a la misma institución donde se generó la lesión,
pues los accionantes guardan detención preventiva por orden de la Jueza Primera de Instrucción
en lo Penal.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. Dentro el proceso penal seguido por el Ministerio Público, a querella del Banco BISA S.A.,
contra Eduardo Fernández Ramos y Luis César Fernández Ramos, por la comisión de los delitos
de manipulación informática y estafa, el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal de El Alto, del
Distrito Judicial de La Paz, mediante Resolución 798/2011 de 25 de noviembre, dispuso la
inhibitoria de la Jueza Primera de Instrucción del Distrito Judicial de Cochabamba, declarándola
incompetente y ordenándole enviar el proceso con detenidos al Distrito Judicial de La Paz,
actuados que se insertan en la orden instruida de 14 de diciembre de 2011 (fs. 4 a 5 vta.)

II.2. Mediante decreto de 20 de diciembre de 2011, la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal


de Cochabamba, se allanó a la determinación de inhibitoria, ordenando la remisión del legajo
procesal ante la autoridad del Distrito Judicial de La Paz, e informó que los ahora accionantes
cumplen la medida cautelar de detención preventiva, por orden de su autoridad, disponiendo
poner en conocimiento de la representante del Ministerio Público que dirige la investigación (fs.
6).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 125


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.3. Los accionantes, mediante memorial de 26 de diciembre de 2011, solicitaron dar estricto
cumplimiento a la Resolución 798/2011; a lo que la autoridad declarada incompetente, por
decreto de 27 de igual mes y año señaló que en dicha condición no podría modificar el lugar
donde deben cumplir la medida cautelar impuesta y que, en todo caso, los encausados deben
acudir a la que fuera competente, una vez radicado los antecedentes del proceso; fundando esta
determinación en el art. “230” del (CPP) (fs. 7 a 8).

II.4. A través del oficio Cite Of. 38/2012 de 17 de enero, el Juez Primero de Instrucción en lo
Penal de La Paz, remitió la orden instruida de 17 de enero de 2012 y el mandamiento de
detención preventiva de los encausados, a los Directores de los Recintos Penitenciario de El
Abra y San Sebastián (fs. 24 y 40).

II.5. Mediante orden instruida de 17 de enero del presente año, la referida autoridad, puso en
conocimiento de los Directores de los Recintos Penitenciarios de El Abra y San Sebastián, la
resolución de la misma fecha, disponiendo emitir el mandamiento de detención preventiva para
el recinto penitenciario de San Pedro de La Paz y ordenando se comisione a la Jueza Cautelar de
Cochabamba efectuar el trámite del traslado de los imputados (fs. 25 a 26 y 42 a 43).

II.6. Cursa en el expediente, los mandamientos de detención preventiva de 9 de enero de 2012,


expedido por el Juez Primero de Instrucción en lo Penal, ordenando la detención preventiva de
Eduardo Fernández Ramos y Luis César Fernández Ramos, en el recinto penitenciario de San
Pedro (fs. 27 y 41).

II.7. De fs. 33 a 38, consta la Orden Instruida de 10 de enero de 2012, conteniendo la


transcripción de la Resolución 798/2011, memorial de 6 de enero del presente año -en el cual los
accionantes solicitaron a la autoridad declarada competente, ordenar a los funcionarios
accionados su traslado a la penitenciaria de La Paz- y, finalmente, incorpora el decreto de 9 de
enero de 2012, el cual establece que la autoridad Judicial de Cochabamba -para entonces
declarada incompetente- pueda autorizar la remisión de los imputados a la penitenciaria de San
Pedro de la ciudad de La Paz.

II.8. Conocedora de la Orden Instruida referida en el punto anterior, la Jueza de Instrucción en


lo Penal de Cochabamba, mediante decreto de 20 de enero de 2012, dispuso poner en
conocimiento de los funcionarios ahora demandados (fs. 39).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan que, no obstante de existir una orden judicial que dispone su traslado al
recinto penitenciario de San Pedro de la ciudad de La Paz, los funcionarios demandados
injustificadamente dilatan que esto se haga efectivo; puesto que únicamente los antecedentes del
proceso fueron remitidos a la autoridad judicial de esa ciudad, por haber operado la acumulación
del proceso por conexitud; por lo que, el hecho de guardar detención preventiva en la ciudad de
Cochabamba, implica una vulneración de su derecho a la libertad, enfatizando que, los
demandados no dan curso a la orden de traslado, cuya autoridad judicial que la emitió es
competente para conocer el proceso por razón de territorio, considerando este accionar como
una severa infracción a la libertad, del cual emerge el impedimento para ejercer oportunamente
el derecho a la defensa material en esa ciudad. En consecuencia, corresponde dilucidar en
revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 126


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La acción de libertad, ha sido instituida por la Constitución Política del Estado en sus arts. 125,
126 y 127, como una acción o mecanismo de defensa de los derechos y garantías a la libertad y a
la vida, derechos que son reconocidos por la misma Ley Fundamental, cuyos destinatarios
resultan ser todos los estantes y habitantes del Estado Plurinacional de Bolivia, que no pueden
ser vulnerados o infringidos sin una justa razón o previo juzgamiento.

Asimismo, la normativa contenida en la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en sus


arts. 65 y 66, establecen que, el propósito u objeto de esta acción constitucional, es de otorgar
una garantía, protección o tutela, de los derechos a la vida, la libertad física y de locomoción;
cuya procedencia es efectiva cuando cualquier ciudadano considere que: su vida está en peligro,
esta ilegalmente perseguida, esta indebidamente procesada y está indebidamente privada de
libertad personal.

La “…acción de libertad, constituye una garantía instrumental de rango constitucional, que


garantiza el ejercicio y respeto del derecho a la libertad personal y de locomoción, inclusive
ahora, el derecho a la vida, cuando ésta se encuentra afectada por la restricción o supresión de
la libertad, cuya finalidad es hacer frente a una situación de arbitrariedad proveniente de
autoridades y/o particulares. Así el art. 125 de la CPE, establece que: 'Toda persona que
considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente
procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de
manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal,
ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a
su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su
derecho a la libertad'. Cabe hacer hincapié, que el Constituyente ha previsto la exención de
toda formalidad en su interposición, así como la rapidez en su trámite que es sumarísimo y su
efecto inmediato, pudiendo ser preventivo, correctivo o reparador” SC 2178/2010-R de 19 de
noviembre.

III.2. Sobre la legitimación pasiva

Con la finalidad de ingresar al análisis de la problemática planteada, es importante establecer los


alcances y la naturaleza de la legitimación pasiva, que se encuentra en la autoridad o persona
particular que incurrió en el acto ilegal o la omisión indebida y de cuya acción u omisión se
advierta la vulneración del derecho a la vida, a la libertad física y de locomoción.

En ese sentido, para la procedencia de la acción de libertad es imprescindible que esté dirigida
contra el sujeto que cometió el acto ilegal o la omisión indebida, o contra la autoridad que
impartió o ejecutó la orden que dio lugar a la persecución, aprehensión, detención,
procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales; en concreto es la coincidencia que se da
entre la autoridad o persona particular que presuntamente causó la vulneración a los derechos
enunciados y aquélla contra quien se dirige la acción, ahora bien, la inconcurrencia de este
presupuesto neutraliza la acción tutelar e impide a este Tribunal ingresar al análisis de fondo de
los hechos denunciados.

Sin embargo y sólo de manera excepcional, es posible ingresar al análisis de esta acción tutelar,
cuando la misma es interpuesta por error en la identidad del sujeto; es decir, sin observar los
términos y parámetros enunciados precedentemente, dicho de otra forma, cuando el sujeto
agraviado -a consecuencia de un error- dirige la acción contra otra persona que no cometió el
acto lesivo; en este caso, se considerará la acción tutelar siempre y cuando la autoridad o
persona particular demandada sea de la misma institución, rango o jerarquía, con idénticas
atribuciones a la que incurrió en el acto ilegal y sólo cuando éste sea manifiestamente contrario a

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 127


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la ley y existan suficientes presupuestos que lo acrediten; no siendo aplicable a otras situaciones
en las que no se aprecie tal error y se advierta la necesidad de contar con mayores datos
convictivos que acrediten la veracidad de los hechos denunciados. En virtud a este
entendimiento, es imprescindible señalar que el error debe ser evidente y suficiente el
condicionamiento factico para apreciar el acto lesivo denunciado; así, en estos casos este
Tribunal ingresará al análisis de la acción planteada, no obstante que se hubiera dirigido contra
otra persona que no sea el autor de la acción u omisión que se cuestiona. Con similar
razonamiento, las SSCC 0039/2011-R y 1192/2010-R.

III.3. Análisis del caso concreto

De lo precedentemente expuesto y de la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se


concluye que los accionantes promovieron la presente acción contra los gobernadores de los
recintos penitenciarios de El Abra y San Sebastián Varones, al considerar que se encuentran
detenidos en los referidos recintos carcelarios de manera arbitraria, no obstante de existir una
orden expresa del Juez Primero de Instrucción en lo Penal de La Paz, que dispone el traslado de
los mismos a la Cárcel de San Pedro de esa ciudad.

Asimismo, es importante considerar la existencia de la Resolución 798/2011, por la que se


dispone la acumulación del proceso por conexitud, ordenando a la Jueza Primera de Instrucción
en lo Penal de Cochabamba remitir el legajo procesal más los detenidos al Distrito Judicial de
La Paz; sin embargo, esta última autoridad remitió los antecedentes del legajo procesal y no así
los detenidos, extremo que derivó en la detención de los accionantes en las penitenciarías de
Cochabamba, sin que los mismos sean trasladados a un recinto carcelario del lugar donde se
tramita la causa principal.

Los extremos enunciados precedentemente, dan cuenta que la lesión alegada se produjo en el
seno de las instancias judiciales, como emergencia del incumplimiento de una orden expresa
pronunciada por un Juez, que de ninguna manera involucra a los funcionarios demandados,
extremo que permite concluir que no recibieron de autoridad alguna una orden expresa y
categórica que disponga la remisión inmediata de los imputados al centro penitenciario de San
Pedro de la ciudad de La Paz, infiriéndose que no provocaron el acto lesivo, en razón a que las
diferentes resoluciones y providencias puestas a su conocimiento, no expresan con meridiana
claridad una orden para efectuar el traslado de los imputados al referido recinto carcelario. En el
marco de este entendimiento, claramente se puede advertir que la acción fue interpuesta contra
funcionarios que carecían de legitimación pasiva, por cuanto no provocaron ni generaron el acto
lesivo denunciado, más al contrario, los mismos no tomaron conocimiento de un mandato claro
o inequívoco proveniente de la autoridad que debía efectuar este trámite.

Ante la inconcurrencia de los presupuestos tendientes a direccionar adecuadamente la presente


acción tutelar, es decir, ante la falta de legitimación pasiva de los funcionarios demandados, es
inviable ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada.

III.3.1. Por otro lado, de conformidad con lo establecido por el art. 126.IV de la CPE,
concordante con el art. 64 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP),
efectuada la audiencia, la resolución debe ser remitida en consulta ante este Tribunal en el plazo
de veinte cuatro horas.

Sin embargo, de la revisión de los antecedentes del cuaderno procesal, se puede colegir que
efectuada la audiencia de consideración de la presente acción de libertad, el 26 de enero de
2012, el Tribunal de garantías remitió dicha Resolución a este Tribunal recién el 6 de febrero del

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 128


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

año en curso, posterior a diez días de emitida esta determinación; lo cual demuestra que estas
autoridades no observaron correctamente los plazos establecidos en las normas citadas
precedentemente.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la tutela, ha efectuado una correcta


compulsa de los antecedentes del caso y de los alcances de esta acción.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y de conformidad con el
art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1° DENEGAR la tutela solicitada.

2° Llamar severamente la atención al Tribunal de Garantías, conformado por Nuria Gisela


Gonzales Romero y Karen Lorena Gallardo Sejas, por no haber observado estrictamente lo
dispuesto por los arts. 126.IV de la CPE y 64 de la LTCP, originando con ello una dilación
indebida en la tramitación de la presente acción, conforme indica el Fundamento Jurídico III.3.1.
de esta Sentencia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0019/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de Libertad
Expediente: 00047-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 01 de 19 de enero del 2012, cursante de fs. 21 a 27, pronunciada por Juan
José Paniagua Cuellar, Juez Cuarto de Sentencia en lo Penal del Tribunal Departamental de
Justicia de Santa Cruz, dentro de la acción de libertad interpuesta por Otto Andrés Ritter
Méndez en representación de Carlos Antonio Escalier Chávez contra Edgar Carrasco Sequeiros
y Sigfrido Soleto Gualoa Vocales de la Sala Penal Primera y Segunda respectivamente del
Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 17 de enero de 2012, cursante de fs. 5 a 7 vta., el accionante expresa
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 129


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.1. Hechos que la motivan

El accionante, manifiesta que, el Ministerio Público presentó imputación formal contra su


representado Carlos Antonio Escalier Chávez por el delito de lesiones gravísimas, tipificado y
sancionado por el art. 270 del Código Penal (CP).

Que en audiencia de aplicación de medidas cautelares se demostró que la tipificación realizada


por el Ministerio Público, no era la correcta y el hecho atribuido debía tipificarse conforme el
art. 274 del CP; se expuso también que no concurría el requisito establecido por el art. 233.1 del
Código de Procedimiento Penal (CPP), ni tampoco los peligros de fuga u obstaculización
descritos en los arts. 234 y 235 del CPP.

Continua señalando que, el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, en violación a los arts. 5, 6,
124, 232, 233, 234 y 235 del CPP y una interpretación errónea del art.13, 13 quater y 15 del CP,
ordenó la detención preventiva de su representado, con el argumento de que no acreditó tener
trabajo, además de que podría influir negativamente sobre terceros.

Asimismo, señala, que su representado interpuso recurso de apelación contra la resolución del
Juez mencionado, misma que radicó en la Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de
Justicia de Santa Cruz; y que en audiencia de apelación, expuso los mismos argumentos y por
consiguiente la Sala Penal precitada, sin realizar una correcta valoración de los elementos de
convicción, confirmó el auto interlocutorio emitido por el Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal, bajo el fundamento de que en el presente caso deben aplicarse los arts. 270 y 274 del CP,
porque ambas normas son complementarias; que no podían ingresar a analizar el tipo penal
imputado, porque la imputación formal es provisional y que su representado tampoco había
acreditado tener trabajo, ni desvirtuado el peligro de obstaculización con relación al art. 235.2.
del CPP.

Por último refiere que Carlos Antonio Escalier Chávez, esta ilegal e indebidamente privado de
su libertad.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de las garantías y principios constitucionales como el debido proceso,


justicia pronta y oportuna, presunción de inocencia, aplicación de la ley más favorable, oralidad,
legalidad, verdad material y los derechos a la libertad y al trabajo, todo lo mencionado
consagrado en los arts. 21.7, 22, 23, 115, 116 y 180 de la Constitución Política del Estado
(CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela y se deje sin efecto la ilegal resolución dictada por los accionados,
asimismo, se disponga que en el plazo de veinticuatro horas lleven a cabo una nueva audiencia.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 19 de enero del 2012, según consta en el acta cursante de fs.
18 a 27 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción


El abogado accionante ratificó los términos expuestos en la acción de libertad interpuesta.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 130


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Edgar Carrasco Sequeiros y Sigfrido Soleto Gualoa, Vocales de la Sala Penal Primera y
Segunda respectivamente, brindaron informe escrito cursante a fs. 17 y vta., puntualizando: a)
Que la acción constitucional de libertad tiene mutación legal y además de equívoco
procedimental, en atención a que el accionante obvió formular su petición contra el Juez Cuarto
de Instrucción en lo Penal; b) Que ambas autoridades no fueron las que dispusieron su detención
preventiva; y c) Que la situación jurídica esta bajo el Control Jurisdiccional del Juez Instructor.

I.2.3. Resolución

El Juez Cuarto de Sentencia en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz,
pronunció la Resolución 01 de 19 de enero del 2012, cursante de fs. 21 a 27 “denegando” la
acción de libertad, bajo los siguientes argumentos: 1) La presente acción constitucional procede
en tres situaciones: a) Cuando una persona creyere que su vida está en peligro; b) Es ilegalmente
perseguida; y, c) Es indebidamente procesada; 2) En el presente caso no peligra la vida del
detenido, considerando además que su abogado no fundamentó este extremo; asimismo se puede
establecer que se han respetado las normas y las reglas referentes al debido proceso al haberse
cumplido las fases esenciales del mismo; 3) El Código de Procedimiento Penal, en ninguno de
sus articulados establece que el suscrito Juzgador es un Juez de tercera instancia y pueda
conocer o resolver apelaciones en tercer grado; 4) El art. 274 del CP, modificado por la Ley 054
de 8 de noviembre del 2010, estaría estableciendo una pena privativa de libertad cuando la
víctima sea un niño, niña o adolescente y que por su penalidad de 2 a 4 años procedería la
detención preventiva; 5) En cuanto a la valoración que hizo el Juez de revisión en primera
instancia, no corresponde observar si ha sido o no correcta la imposición de medidas cautelares,
por cuanto la imputación formulada por el Ministerio Publico es de carácter provisional; y 6) No
se ha comprobado la existencia de violación al debido proceso.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documentación adjunta al expediente, se evidencia que:

II.1. De fs. 2 a 4, cursa imputación formal contra Carlos Antonio Escalier Chávez por la
presunta comisión del delito de lesiones gravísimas sancionado en el art. 270 del CP y solicitud
de aplicación de medidas cautelares (detención preventiva) fundamentando la misma en la
concurrencia de lo establecido por los arts. 233.1 y 2, 234.2 y 235.1 y 2 del CPP.

II.2. De fs. 54 y 58, cursa Auto Interlocutorio de 30 de diciembre del 2011, por el cual, el Juez
Cuarto de Instrucción en lo Penal, dispone la detención preventiva del imputado Carlos Antonio
Escalier Chávez por concurrir lo establecido en los arts. 233.1 y 2 en relación al 234.1 y 235.2,
del CPP.

II.3. De fs. 68 a 77 vta., cursa acta de audiencia de apelación de medida cautelar y resolución
emitida por la Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, la
misma que confirma la Resolución emitida por el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, señala que su representado se encuentra ilegal e indebidamente privado de su


libertad, por cuanto los Vocales demandados, al confirmar la resolución apelada no han
realizado una correcta valoración de los elementos de convicción presentados por el accionante

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 131


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

para acreditar su situación laboral y la no concurrencia de peligros procesales, siendo ilegal la


resolución emitida, la misma vulnera las garantías y principios constitucionales.

En consecuencia, corresponde en revisión verificar si tales extremos son evidentes, a fin de


conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

El art. 23.I de la CPE, determina: “Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal.
La libertad personal solo podrá ser restringida en los límites señalados por ley, para asegurar el
descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales”; y, el art.
13.I del mismo cuerpo legal, dispone que: “Los derechos reconocidos por esta Constitución son
inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y progresivos. El Estado tiene el deber
de promoverlos, protegerlos y respetarlos”.

La Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH), instrumento que forma parte del
bloque de constitucionalidad, en su art. 3 determina: “Todo individuo tiene derecho a la vida, a
la libertad y a la seguridad de su persona”; y, el art. 8 de la misma DUDH establece: “Toda
persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la
ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o
por la ley”; criterio también recogido por el art. 25 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos.

El art. 125 de la CPE, establece: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

De conformidad a la disposición constitucional citada, esta acción se encuentra destinada a la


defensa de los derechos a la vida y a la libertad personal; es una acción de carácter
extraordinario, de tramitación especial y sumarísima. A través de dicha acción, se preserva el
derecho a la vida, se evita una detención ilegal, o se repara la ilegal restricción de la libertad o el
procesamiento indebido, manteniendo las características de inmediatez de la protección,
informalismo, generalidad e inmediación; procede contra cualquier autoridad pública, pues no
reconoce fueros ni privilegios.

Ahora bien, solamente puede ingresarse al análisis de la problemática planteada mediante la


acción de libertad, cuando los actos denunciados operan como causa para la amenaza, restricción
o supresión de los derechos a la libertad física y locomoción, de modo que las lesiones a otros
derechos, no podrán ser compulsadas; sin embargo, y de forma excepcional, serán tutelados la
garantía al debido proceso y el derecho a la defensa, cuando estos fueran la causa “directa” de la
restricción del derecho a la libertad y el accionante hubiese estado en indefensión absoluta.

De la misma forma, la acción de libertad, por la urgencia de la situación, se configura como el


medio más eficaz para restituir los derechos afectados; sin embargo, en caso de existir
mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para
restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser
activados previamente por el o los interesados o afectados; en estos casos, la acción de libertad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 132


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse
agotado estas vías específicas.

De lo expuesto precedentemente, debe establecerse que en caso de existir norma expresa que
prevea mecanismos intra-procesales efectivos y oportunos de defensa de estos derechos
fundamentales, deben ser utilizados previamente antes de activarse la tutela constitucional,
aspecto que se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la DUDH y 25 de
la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

III.2. De los límites y alcances en relación a la valoración de la prueba en medidas


cautelares

Es necesario referir el alcance que ha establecido el Tribunal Constitucional con respecto a la


valoración de las pruebas, en las solicitudes de cesación a la detención preventiva, el mismo ha
señalado que es una atribución privativa del juez de control jurisdiccional o del que conoce la
causa en sus diferentes instancias y siendo atribución exclusiva de la jurisdicción ordinaria, en
una acción de libertad, no le corresponde al juez de garantías, ni mucho menos al Tribunal
Constitucional realizar una nueva valoración de las pruebas, empero, excepcionalmente la
jurisdicción constitucional puede realizar la valoración siempre y cuando se cumplan
determinados presupuestos, siendo estos: “…cuando en dicha valoración a) exista apartamiento
de los marcos legales de razonabilidad y equidad previsibles para decidir (SSCC 0873/2004-R y
0106/2005-R, entre otras), o b) cuando se haya omitido arbitrariamente valorar la prueba y su
lógica consecuencia de la lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales (SC
0129/2004-R, de 28 de enero)…”, líneas jurisprudenciales reiteradas por la SC 0222/2010 de 31
de mayo.

De lo referido, se establece que solo en el caso de cumplirse los presupuestos señalados, puede
operar el control de constitucionalidad para la restitución de los derechos vulnerados, entre
tanto, no concurran los mismos, el Tribunal no puede realizar una valoración probatoria. (SC
1926/2010-R de 25 de octubre).

Asimismo la SC 0779/ 2011-R de 20 de mayo a estableció: “La valoración de los elementos que
sustentan las decisiones de las autoridades judiciales de la jurisdicción ordinaria, es facultad
privativa de ellas, en virtud a los principios de legalidad e inmediación que hacen tanto a su
incorporación como a su ponderación tomando en cuenta el objeto a probar; es decir, su
pertinencia, así como su oportunidad. No es posible rehacer ese equilibrio a través de la lectura
de actas, incurriendo en meros subjetivismos, pues de así hacerlo, este Tribunal, se convertiría
en una instancia revisora de la actividad valorativa probatoria de otra jurisdicción, situación
que resultaría contradictoria con los fines específicos que esta instancia debe cumplir en su
calidad de contralor de la constitucionalidad (…)”.

III.3. Análisis del caso

En el presente caso, tal como se evidencia de las conclusiones y antecedentes, se tiene que el
Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, ha sido la autoridad que ha dispuesto la detención
preventiva del accionante, por existir la probabilidad de que sea autor o participe del hecho,
además de concurrir riesgo de fuga y de obstaculización en la averiguación de la verdad,
aplicando los arts. 233. 1 y 2 con relación al art. 234.1 y el art. 235.2 todos del CPP, y que en
base a dicha apreciación emitió el Auto Interlocutorio de 30 de diciembre del 2011; el mismo
que ha sido apelado por el accionante y fue confirmado por la Sala Penal Segunda constituida
por los Vocales Sigfrido Soleto Gualoa y Edgar Carrasco Sequeiros mediante Resolución de 16

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 133


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de enero de 2012, bajo el fundamento de que no podían ingresar analizar el tipo penal imputado,
ya que la imputación es provisional y que no se ha desvirtuado la concurrencia del peligro de
fuga, por cuanto, el accionante no acreditado tener trabajo, ni desvirtuado la concurrencia del
peligro de obstaculización con relación al art. 235.2.

De lo referido precedentemente se establece que los Vocales demandados al dictar el Auto


de Vista de 16 de enero de 2012, han obrado conforme sus facultades jurisdiccionales, en
base a la ponderación de elementos, llegando como resultado a la conclusión de que el
accionante no ha desvirtuado la concurrencia de los peligros procesales señalados.

Por lo que, en la valoración probatoria realizada por los Vocales demandados, no existe
apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad, ni se ha omitido
arbitrariamente valorar la prueba; no existiendo a criterio de este Tribunal los presupuestos
señalados precedentemente, los mismos establecidos por la SC 0965/2006-R de 2 de octubre y
reiterados por la SC 0222/2010 de 31 de mayo, resulta evidente, que no existe vulneración de
derechos del accionante.

Además, este Tribunal, no puede realizar una nueva valoración probatoria, porque incurriría
en meros subjetivismos y se convertiría en una instancia revisora (SC 0779/2011-R de 20 de
mayo), desnaturalizando su carácter de contralor de la Constitución, toda vez que el
accionante no presento ningún elemento probatorio con validez legal, mismo que pudiera ser
observado o valorado en el proceso penal.

En consecuencia, el Juez de garantías, al “denegar” la acción tutelar, obró correctamente.

POR TANTO

“Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado y el art. 12.7 de la Ley de
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución de 19 de
enero de 2012, cursante de fs. 21 a 27 vta., pronunciada por el Juez Cuarto de Sentencia en lo
Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz; y, en consecuencia, DENEGAR la
tutela solicitada”.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0020/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00003-2012-01-AL
Departamento: La Paz

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 134


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución 01/2012 de 4 de enero, cursante de fs. 69 a 73 pronunciada por Rene O.


Delgado Ecos, Juez Tercero de Sentencia, dentro de la acción de libertad interpuesta por Edwin
Daniel Hurtado Huanca en representación sin mandato de Luis Fernando Córdova Santiváñez
contra Nancy Bustillos de Altuzarra y Carlos Blanco Quisbert, Jueces Técnicos del Tribunal
Quinto de Sentencia, Roberto C. Merida Viscarra, Secretario del Tribunal Primero de
Sentencia, todos del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz ; Rubén Pastor Gemio
Bustillos, Director del Recinto Penitenciario de San Pedro; y Andrés Alvarado Cortez, Director
Departamental del Régimen Penitenciario, del Distrito Judicial de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 3 de enero de 2012, cursante de fs. 21 a 22 Bis, el accionante


expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Su representado, está siendo procesado como supuesto cómplice dentro el proceso seguido por el
Ministerio Público contra Santos Ramírez y otros por delitos de contratos lesivos al Estado y otros; es
así que el 22 de diciembre de 2011, se llevó a cabo la audiencia de consideración de cesación de
detención preventiva, acto en el que se dispuso la cesación de detención preventiva, aplicando a su
representado como medidas sustitutivas las siguientes: “…1) detención domiciliaria con dos escoltas
policiales a tiempo completo sin derecho a salir de su domicilio, y que deberá ser verificado por el Sr.
Secretario Abogado (…), 2) la obligación de presentarse en este Tribunal a efectos de firmar el
cuaderno de control y asistencia todos los día lunes y viernes de cada semana, 3) El arraigo por ante
las Oficinas de la Dirección del Servicio Nacional de Migración. Cumplidas estas medidas
sustitutivas y previo informe del Sr. Secretario Abogado del Tribunal, se expediría el correspondiente
mandamiento de ley…” (sic); asimismo, mediante memorial de 24 del mismo mes y año, presentando
ante el Tribunal Primero de Sentencia, adjuntando documentación respaldatoria en cumplimiento a
las medidas dispuestas; sin embargo, el Presidente del mencionado Tribunal no emitió el
mandamiento de detención domiciliaria, seguidamente como consecuencia del receso judicial de fin
de año; el expediente paso a conocimiento del Tribunal Quinto de Sentencia, y radicada que fue la
causa, mediante memorial de 27 de diciembre del referido año, solicitó se expida el mandamiento de
detención domiciliaria, petición que fue rechazada con el argumento de que debía cumplirse a
cabalidad lo dispuesto por la Resolución 69/2011 (es decir, adjuntar certificación de arraigo); y una
vez cumplido lo observado, el 29 de ese mes y año, reiteró su pedido, siendo nuevamente rechazada,
esta vez bajo el argumento de que previamente la autoridad debía verificar si los custodios ya fueron
asignados.

Por su parte el Director de Régimen Penitenciario de San Pedro, mediante oficio de 29 de diciembre
de 2011, hizo conocer al Tribunal, que su personal no estaba en la posibilidad de cumplir ese mandato
porque sólo contaba con cincuenta y cuatro efectivos y que a diario los mismos concurren de ochenta
y cinco a noventa audiencias con los detenidos; este aspecto, señala el accionante, que le causa
perjuicio, por lo que, a causa del mismo aún se encuentra detenido en el penal de “San Pedro”, no
pudiendo cumplir su detención en su domicilio tal cual lo había establecido el Tribunal Primero de
Sentencia mediante Resolución 69/2011.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

No se mencionan los derechos supuestamente lesionados ni la norma legal infringida.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 135


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicita se ordene a las autoridades policiales le designen dos escoltas y sin perjuicio de la
misma, los jueces demandados expidan y presenten el mandamiento de detención domiciliaria al
panóptico de “San Pedro” para que se efectivice la Resolución 69/2011.
I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 4 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 57 a
68, se produjeron los siguientes actuados:
I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante asistió a la audiencia de consideración de la acción; y habiendo hecho uso de la


palabra su abogado, ratificó en forma oral los fundamentos vertidos en su demanda, aclarando
además que, el 30 de diciembre de 2011 se presentó un recurso de reposición ante el Tribunal
Quinto de Sentencia.

I.2.2. Informe de las autoridades y funcionarios policiales demandados

Nancy Bustillos de Altuzarra, Jueza demandada, brindó informe oral en audiencia,


puntualizando: a) Es evidente que su Tribunal ha conocido el proceso penal de referencia, pero
ya fue remitido al Juzgado donde se emitió la Resolución correspondiente; b) El accionante
solicitó a su Tribunal se libre el mandamiento de detención domiciliaria mediante memorial
presentado el 27 de diciembre de 2011, para lo cual adjuntó un baucher de arraigo referido a otra
causa y no el que correspondía al proceso, y en respuesta, dispuso que cumpla con todas las
medidas que fijó la Resolución 69/2011; c) El 29 de diciembre de 2011, por memorial
presentaron el baucher, en el cual constaba el arraigado de Luis Fernando Córdova Santiváñez,
por la acción que tenía bajo su conocimiento y solicitaron a su vez se les expida el mandamiento
de detención domiciliaria; empero, su autoridad esperaba la respuesta del Director del Régimen
Penitenciario y del Director del Recinto Penitenciario de San Pedro, respecto a los dos escoltas
que debían asignarle al accionante, entre tanto el tiempo transcurrió y el receso judicial concluyó
por lo que, no pudo resolverse el recurso de reposición que hubo presentado el accionante; y, d)
Su Tribunal conoció circunstancialmente la causa, para continuar con los trámites que se había
iniciado en el Tribunal Primero de Sentencia y en ese fin ha tratado de cumplir y hacer cumplir
lo determinado por la autoridad referida, pero hasta esa fecha no había recibido el informe
respecto a la asignación de los escoltas para el accionante, por el contrario sólo ha recibido un
informe referente a que no se ha podido nombrar a los dos escoltas.

Por su parte, Carlos Blanco Quisbert, Juez codemandado complementó el informe de su colega
de Tribunal e informó que la parte accionante reconoce que no ha cumplido con las formalidades
cuando solicita que se le designe dos escoltas en el día.

Del mismo modo, Rubén Pastor Gemio Bustillos, Director del Recinto Penitenciario de San
Pedro, mediante informe oral puntualizó: 1) Es evidente que ha conocido el acta de
consideración de cesación a la detención preventiva; 2) Es falso que se haya negado el
mandamiento de detención domiciliaria; y, 3) Ha elevado informe al Juez poniendo en
conocimiento que no contaba con los escoltas respectivos porque a diario los funcionarios
policiales custodian a personas detenidas en ochenta o noventa audiencias por día, aclara que,
simplemente se ha remitido informe pero que en ningún momento se ha incumplido con el
mandato sobre detención domiciliaria, porque nunca han presentado tal mandamiento al recinto
penitenciario.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 136


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

A su vez, Andrés Alvarado Cortez, Director Departamental del Régimen Penitenciario emitió
informe oral y puntualizó: i) En su momento elevó un informe al Juez de la causa, haciendo
conocer que la Dirección Departamental del Régimen Penitenciario es simplemente una
dirección administrativa, por lo que no cuenta directamente con un personal oficial lo que
imposibilitaba designar efectivos de seguridad para una detención domiciliaria.

Por su parte, Roberto Merida Viscarra, Secretario del Tribunal Primero de Sentencia, mediante
oficio de 4 de enero de 2011, corriente fs. 44 a 45, informó lo siguiente: a) A fin de lograr la
asignación de dos escoltas, libraron los oficios respectivos al Director del penal de “San Pedro”
y al Director Departamental del Régimen Penitenciario, presentando el 30 de diciembre de 2011
y 4 de enero de 2012, respectivamente, notas de respuestas, informando que no contaban con
recursos humanos para poder asignar como escoltas del accionante; y, b) No es cierto, que el
cuaderno de actuaciones no haya sido remitido a tiempo al Tribunal Quinto de Sentencia.

I.2.3. Resolución

El Juez Tercero de Sentencia del Tribunal Departamental de La Paz, constituido en Juez de


garantías, pronunció la Resolución 01/2012 de 4 de enero, cursante de fs. 69 a 73, denegando la
tutela de acción de libertad formulada con los siguientes argumentos: 1) A través de la presente
acción, la parte accionante solicita se disponga que las autoridades jurisdiccionales que conocen
el caso emitan el mandamiento de detención domiciliaria y sea presentado al panóptico de “San
Pedro” para la efectivización de la Resolución emitida por el Juez Primero de Sentencia, sin
haberse aún designado los dos escoltas que dispone la referida Resolución; al respecto refiere,
que su autoridad constituida en autoridad de garantías, no puede modificar la Resolución del
Juez del Juez Primero de Sentencia y disponer que las autoridades jurisdiccionales libren el
mandamiento de detención domiciliaria sin que previamente al accionante le haya asignado los
dos funcionarios policiales para su custodia, por lo que la presente acción, no corresponde ser
considerada por esta vía sino por el mismo Juez que emitió la Resolución de modificación de
detención preventiva; y, 2) Asimismo, refiere que no fueron agotadas las vías legales para que se
active la presente acción de libertad.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. El Tribunal Primero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, en


audiencia de consideración de cesación a la detención preventiva realizada el 22 de diciembre de
2011, emitió la Resolución 69/2011, cursante de fs. 14 a 16, por el que dispone la cesación de
detención preventiva del acusado Luis Fernando Córdova Santiváñez, disponiéndose las
siguientes medidas sustitutivas: i) La detención domiciliaria con dos escoltas policiales a tiempo
completo sin derecho de salida de su domicilio, mismo que debería ser verificado por el
Secretario Abogado del Tribunal mencionado; ii) La obligación de presentarse en ese Tribunal a
efectos de firmar el cuaderno de control y asistencia todos los días lunes y viernes de cada
semana; y, iii) El arraigo por ante las oficinas de la Dirección del Servicio Nacional de
Migración. Cumplidas las medidas sustitutivas y previo informe del Secretario del Tribunal se
expediría el correspondiente mandamiento de ley.

II.2. La parte querellante mediante su abogada, en la misma audiencia, de forma oral interpuso
recurso de apelación incidental contra la Resolución 69/2011 (fs. 57 a 68).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 137


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.3. Pese al recurso de apelación formulada por la parte querellante, Luis Fernando Córdova
Santiváñez mediante memorial de 24 de diciembre de 2011 corriente a fs. 17 y 17 vta., solicitó
se expida mandamiento de detención domiciliaria, argumentando que había cumplido con todas
las medidas dispuestas; sin embargo, la solicitud no fue atendida por que el Secretario del
Tribunal Primero de Sentencia abrió las oficinas a horas 11:00.

II.4. Por receso judicial de fin de año, el expediente pasó a conocimiento del Tribunal de turno,
ante cuya autoridad el accionante refiere en acta de audiencia de fs. 57 a 68 que, mediante
memorial de 27 de diciembre de 2011, solicitó se libre el mandamiento de detención
domiciliaria, pero el mismo fue rechazado por no haberse adjuntado el certificado de arraigo.

II.5. En forma reiterada, adjuntando el mandamiento de arraigo, el representado del accionante


refiere en acta de audiencia de fs. 57 a 68, que mediante memorial de 29 de diciembre de 2011,
impetró el mandamiento de detención domiciliaria, no dándose curso a dicho petitorio, porque
recibieron un informe del Gobernador del penal en sentido que no existían los custodios
suficientes.

II.6. Mediante oficio cursante a fs. 4, de 30 de diciembre de 2011, presentado al Tribunal Quinto
de Sentencia, Rubén Pastor Gemio Bustillos, Director del Recinto Penitenciario de San Pedro,
informa que el personal de seguridad externa (policías escoltas) no están en la posibilidad para
cumplir como escoltas con el arresto domiciliario por veinticuatro horas del privado de libertad
Luis Fernando Córdova Santiváñez, porque sólo cuenta con cincuenta y cuatro hombres, mismos
que tienen que acompañar a los privados de libertad de por lo menos ochenta y cinco a noventa
audiencias por día, sin contar con las salidas médicas, al “IDIF, SEGIP” y otros.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que los Jueces Técnicos del Tribunal Quinto de Sentencia, no expidieron el
mandamiento de detención domiciliaria a favor de su representado, con el argumento que el Director
del Recinto Penitenciario de San Pedro le había informado que no contaba con el personal policial
suficiente para asignar los dos policías custodios. En consecuencia, corresponde dilucidar en
revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. De la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


libertad (art. 125), disponiendo que: “Toda persona que considere que su vida está en peligro,
que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a
su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

Para que proceda esta acción, el impetrante de tutela, deberá considerar que previamente a su
interposición, se debe usar los medios de defensa eficaces y oportunos existentes para proteger
su derecho a la libertad supuestamente lesionado, dada la naturaleza subsidiaria excepcional que
la caracteriza, desarrollada por la jurisprudencia anterior en conocimiento de los recursos de
hábeas corpus y reafirmada en vigor del nuevo modelo constitucional y la naturaleza de la
acción de libertad, a través de la SC 0008/2010-R de 6 de abril, que establece: “I…El recurso de
hábeas corpus, ahora acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz para conocer y restituir
cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a la vida, la libertad o

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 138


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

constituiría persecución o procesamiento indebido que atente o ponga en peligro el derecho a la


libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar de existir mecanismos de
protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos resulten ser
evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de defensa, por la
urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir los derechos
afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean
idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o
procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos
por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse restituido los
derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas” (las negrillas nos
corresponden).

En ese marco, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, sobre la base de los valores de respeto,


complementariedad, transparencia y equilibrio previstos en el art. 8.II de la Constitución Política
del Estado (CPE), estableció que todo acto: “…de las entidades que administran justicia, deben
sujetarse a los principios y valores constitucionales, a los que también está sujeto este Tribunal
Constitucional, de tal manera que debe evitar cualquier intromisión, pero también conflicto o
tensión con otras jurisdicciones, como es la ordinaria, debiendo en todo caso actuar dentro de
los márgenes de razonabilidad y equilibrio”.

En ese entendido, la indicada Sentencia, unificando las subreglas de subsidiariedad, se


pronunció sobre el recurso de reposición previsto en los arts. 401 y 402 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), señalando que cuando existe privación de libertad y evidente
negligencia o dilación por parte de las autoridades que rigen la actividad procesal, se activa
inmediatamente la acción de libertad para impugnar esa actitud lesiva a la libertad por parte de
la autoridad jurisdiccional: “…empero, lo que no está permitido es que el agraviado
incumpliendo su deber de actuar con lealtad procesal, habiendo activado el recurso de
reposición y estando en trámite el mismo en la jurisdicción ordinaria, de manera paralela
active la acción de libertad en la jurisdicción constitucional, en ese caso no es posible
ingresar al análisis de fondo” (las negrillas son nuestras).

III.2. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el caso analizado, el accionante alega que se dispuso a favor de su representado la cesación de la


detención preventiva, aplicándole como medidas sustitutivas la detención domiciliaria, la
presentación ante el Tribunal a efecto de firmar el cuaderno de control y asistencia todos los días
lunes y viernes de cada semana y el arraigo por ante las Oficinas de la Dirección del Servicio de
Migración. No obstante que cumplió con dichas medidas, los jueces técnicos del Tribunal Quinto de
Sentencia, no expidieron el mandamiento de detención domiciliaria a favor de su representado, con el
argumento que el Director del Recinto Penitenciario de San Pedro informó que no contaba con el
personal policial suficiente para asignar los dos policías custodios.

Ahora bien, de los antecedentes cursantes en obrados se constata que efectivamente, por
Resolución 69/2011 de 22 de diciembre, cursante de fs. 14 a 16, el Tribunal Primero de
Sentencia dispuso la cesación de la detención preventiva del acusado, quien, por memorial de 24
de diciembre del 2011, solicitó se expida el correspondiente mandamiento, argumentando que se
cumplieron con todas las medidas dispuestas; sin embargo, dicho pedido no fue atendido y, a
consecuencia del receso judicial de fin de año, el expediente pasó a conocimiento del Tribunal
Quinto de Sentencia, ante quien acudió el representado del accionante por memorial de 27 del
citado mes y año, solicitando la expedición del mandamiento de detención domiciliaria, que fue
rechazado por los Jueces ahora demandados por no haberse adjuntado el certificado de arraigo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 139


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Posteriormente, por memorial de 29 de diciembre de 2011, nuevamente solicitó la expedición


del mandamiento de detención domiciliaria; pese a ello, no se dio curso a su pedido porque los
Jueces Técnicos del Tribunal Quinto de Sentencia recibieron un informe del Director del
Recinto Penitenciario de San Pedro, en sentido que no existían los custodios suficientes.

Contra dicha determinación, de acuerdo a lo expresado por la abogada del accionante en la


audiencia de acción de libertad, por memorial de 30 de diciembre de 2011, presentó recurso de
reposición, pidiendo nuevamente la designación de dos escoltas; sin embargo, dicho recurso no
pudo ser resuelto debido a que, conforme sostienen los Jueces demandados, el receso judicial
concluyó y el proceso fue remitido nuevamente a al Tribunal Primero de Sentencia.

Consiguientemente, se constata que el recurso de reposición formulado por el representado del


accionante se encuentra en tramitación, por lo que, en su caso, debe acudir ante el Tribunal
Primero de Sentencia, exigiendo que se pronuncien sobre el recurso presentando, no pudiendo
este Tribunal pronunciarse sobre el fondo del problema jurídico planteado en la presenta acción,
debido a que, conforme a la jurisprudencia contenida en la SC 0080/2010-R, que ha sido glosada
en el Fundamento precedente, no es posible activar, de manera paralela, la jurisdicción ordinaria
y la constitucional, ello con la finalidad de evitar resoluciones contradictorias y disfunciones
procesales, no queridas por el orden constitucional, en el marco de los valores de
complementariedad y equilibrio, previstos en el art. 8.II de la CPE.

En consecuencia, el Juez de garantías al denegar la acción de libertad, aunque con otro


fundamento, ha actuado correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada, en virtud


de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la
Resolución 001/2012 de 4 de enero, cursante de fs. 69 a 72, dictada por el Juez Tercero de
Sentencia en lo Penal del Tribunal departamental de Justicia de La Paz y, en consecuencia,
DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0021/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de Libertad
Expediente: 00006-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 140


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución de 11 de enero de 2012, cursante de fs. 20 a 22, pronunciada dentro de la


acción de libertad interpuesta por Gustavo Helguero Cuentas en representación sin mandato de
Nelson Ortega Jaldín, Erwin Cara, Jorge Rivero Rivera, Edwin Corait Flores, Ramón
Domínguez Vilchez, Juan Colque Paco, Donato Ayaviri, Leinar Condori, José Luis Espinoza
Cruz, Javier Valencia Valencia, Lino Salguero Yucra, Marco Antonio Serrudo Martínez,
Nemias Serrudo Martínez, Noel Guzmán Serrudo, Juan Colque Paco, Wilber Rojas Mamani,
José Mita Chuve, Alejandro Huarayo Villca, Miguel Ángel Rotondo Barrero, Moises Serrano
Mamani, Juan Cailo Heredia, Parla Parra López, Teófilo Fernández Figueroa, Víctor
Fernández Figueroa, Luciano Aramayo Rocha, Juan Guillermo Sánchez, Edilberto Cayampi
Machaca y Henry Jhonny Inturias Espinoza contra Felipe Antonio Molina Flores, Fiscal de
Materia de Yapacaní Prov. Ichilo y Ramiro Quisbert Chipana, Comandante de la Policía de la
provincia Ichilo-Yapacaní.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 10 de enero de 2012, cursante de fs. 2 a 3 vta., los accionantes a
través de su representante, expresan los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 8 de enero de 2012, en horas de la mañana, en la ciudad de Yapacaní, los accionantes fueron


aprehendidos por la policía sin cometer delito alguno y fueron conducidos hasta la ciudad de
Montero, con el fin de iniciar la investigación, por supuestamente haber transgredido la tranquilidad
pública.

Agregan que, sin habérseles tomado la declaración informativa, permanecieron detenidos por
más de 24 horas, y el inicio de la investigación tampoco fue comunicado al Juez cautelar de
turno, por lo que los accionantes fueron injustamente perseguidos e indebidamente detenidos y
procesados.

Asimismo, afirman que, el representante del Ministerio Público de Yapacaní y el Comandante


de la Policía de la provincia Ichilo del departamento de Santa Cruz, dispusieron la aprehensión
de éstos, sin ningún mandamiento emitido por autoridad competente.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Los accionantes a través de su representante, sin citar norma alguna, denuncian la vulneración
del derecho a la libertad.

I.1.3. Petitorio

Solicitan se fije día y hora de audiencia, y sea declarada procedente la acción de libertad
interpuesta.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 11 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 17
a 18 vta., produciéndose los siguientes actuados:
I.2.1. Ratificación de la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 141


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El representante de los accionantes, en ausencia de estos, asistió a la audiencia en compañía de


sus abogados, quienes haciendo uso de la palabra ratificaron los términos de la demanda
añadiendo además, los siguientes argumentos: a) La madrugada del 9 de enero del presente año,
un grupo de policías al mando de los ahora accionados, además de la Comandante
Departamental de la Policía de Santa Cruz, Lily Cortez Avalos, dentro de una conmoción
política por temas municipales, vulneraron los derechos a la libre locomoción, derecho al trabajo
y derecho a la vida de los ahora accionantes, haciendo extensiva la acción de libertad en contra
de la Comandante Departamental, Lily Cortez Avalos; b) El art. 6 del Código de Procedimiento
Penal (CPP), que protege y garantiza la presunción de inocencia, fue vulnerado por las
autoridades ahora recurridas, quienes además los maltrataron, los golpearon y les quitaron sus
pertenencias; c) El art. 228 del CPP dispone, que el Fiscal o la policía en ningún caso podrán
disponer la libertad de una persona aprehendida, ésta deberá ser puesta a disposición del Juez,
quien definirá su situación procesal. Sin embargo, el representante del Ministerio Público al
enterarse de la presentación de la “Acción de Libertad” y al darse cuenta de todas las
vulneraciones, cesó el arresto “continuando con la vulneración a sus defendidos” (sic),
señalando que ni siquiera existe el inicio de investigación sobre la denuncia contra los ahora
accionantes.

Asimismo, la autoridad judicial cedió la palabra al accionante, quien manifestó que sus
representados fueron privados de su libertad, sufriendo vejámenes, torturas, transgrediéndose el
art. 15 de la Constitución Política del Estado (CPE); solicitando la libertad del ciudadano Lino
Salguero Yucra.

I.2.2. Informe de la autoridad fiscal y policial demandadas

Las autoridades recurridas, Felipe Antonio Molina Flores y Ramiro Quisbet Chipana, Fiscal de
Materia de Yapacaní y Comandante de la Policía de la provincia Ichilo del departamento de
Santa Cruz, pese a su legal notificación no estuvieron presentes en la audiencia, la misma que se
llevó a cabo en su rebeldía como lo dispone el art. 126 de la CPE.

Sin embargo, ambas autoridades demandadas presentaron sus informes ante la autoridad
judicial, a los que se dio lectura conjuntamente con los documentos de descargo.

El Fiscal de Materia de Yapacaní, Felipe Antonio Molina Flores, mediante informe presentado
el 11 de enero de 2012, señaló que su autoridad no está a cargo de la dirección funcional de la
investigación del caso referido y afirmó que el mismo estaba a cargo de una comisión de fiscales
de la ciudad de Montero. En el mencionado informe la autoridad accionada señala la SC
080/2010-R de 3 de mayo, referente al principio de subsidiariedad, afirmando que en este caso,
tanto el accionante como los representados, no acudieron a la autoridad llamada por ley para
hacer valer los derechos conculcados, siendo así que debía acudirse al juez que conoció el inicio
de la investigación o en su ausencia al juez cautelar de turno. Finalmente solicita se deniegue la
tutela jurídica constitucional solicitada por el accionante.

El Comandante de la Policía de la provincia Ichilo, Ramiro Quisberth Chipana, mediante


informe presentado el 11 de enero de 2012, expone los siguientes extremos: 1) La Sala Penal
Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz dispuso la restitución de David
Carvajal Villca, al cargo de Alcalde Municipal de Yapacaní, ordenando el desalojo y retiro de
todas las pseudo autoridades y personas ajenas a la institución apostadas en las oficinas de
Gobierno Municipal de Yapacaní; 2) Cuando una comisión especial proveniente del Comando
Departamental de la Policía Boliviana de Santa Cruz, se disponía a ejecutar la disposición de la
Sala Penal Segunda, un sin número de ciudadanos en estado de ebriedad bloquearon la avenida

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 142


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

principal con el objeto de obstaculizar la llegada de los funcionarios policiales, motivo por el
cual en conformidad con lo establecido en el art. 225 y 230 del CPP fueron arrestados en
flagrancia; siendo puestos bajo control del Dr. Felipe Molina, representante del Ministerio
Público de Yapacaní para después ser trasladados a la ciudad de Montero donde una comisión de
fiscales estaba a cargo de la dirección funcional de la investigación del proceso iniciado a
denuncia de la Comandante de la Policía de ese municipio; 3) Asimismo la autoridad accionada,
hizo referencia a la SC 080/2010- R de 3 de mayo, en relación al principio de subsidiariedad,
afirmando que el accionante o sus representados no acudieron a la autoridad llamada por ley
para hacer valer sus derechos vulnerados, solicitando se deniegue la tutela jurídica
constitucional.

I.2.3. Resolución

El Juez de Partido y Sentencia de la provincia Ichilo, con asiento fijo en la localidad de


Yapacaní, constituido en juez de garantías, pronunció la Resolución de 11 de enero de 2012, en
la que “deniega” la acción de libertad interpuesta por Gustavo Helguero Cuentas en
representación sin mandado de Nelson Ortega Jaldín, Erwin Cara, Jorge Rivero Rivera, Edwin
Corait Flores, Ramón Domínguez Vilchez, Juan Colque Paco, Donato Ayaviri, Leinar Condori, José
Luis Espinoza Cruz, Javier Valencia Valencia, Lino Salguero Yucra, Marco Antonio Serrudo
Martínez, Nemias Serrudo Martínez, Noel Guzmán Serrudo, Juan Colque Paco, Wilber Rojas
Mamani, José Mita Chuve, Alejandro Huarayo Villca, Miguel Ángel Rotondo Barrero, Moises
Serrano Mamani, Juan Cailo Heredia, Parla Parra López, Teófilo Fernández Figueroa, Víctor
Fernández Figueroa, Luciano Aramayo Rocha, Juan Guillermo Sánchez, Edilberto Cayampi
Machaca y Henry Jhonny Inturias Espinoza contra Felipe Antonio Molina Flores, Fiscal de Materia
de Yapacaní y Ramiro Quisbert Chipana, Comandante de la Policía de la provincia Ichilo-Yapacaní.
Conteniendo el fallo dictado los siguientes argumentos: i) Solo opera la acción de libertad
cuando los accionantes han utilizado todos los mecanismos idóneos, eficientes y oportunos de
defensa, y a pesar de haber agotado todas las vías procesales especificas, sus derechos no fueron
restituidos. ii) Conforme lo señala la SC 080/2010-R de 3 de mayo, cuando aún no existe
imputación formal, ni aviso de inicio de investigación, y se evidencia vulneración de derechos,
estos deben ser puestos en conocimiento del Juez cautelar, que es la autoridad encargada del
control jurisdiccional de la investigación y específicamente de los actos del Ministerio Público y
de los funcionarios policiales, desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa
preparatoria. Por lo que, el accionante debió presentar de inmediato su reclamo ante el Juez
cautelar, no resultando viable acudir directamente o de manera simultánea a la justicia
constitucional, para activar la garantía establecida por el art. 125 de la CPE.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

II.1. Mediante oficio 02/2012 de 5 de enero, la Sala Penal Segunda, instruye al Comandante
Departamental de la Policía, preste el auxilio policial necesario para asegurar la efectividad de la
Sentencia Constitucional de 28 de diciembre de 2011, pronunciada dentro de la Acción de
Amparo Constitucional interpuesta por David Carvajal Villca, en su condición de Alcalde
Municipal de Yapacaní- provincia Ichilo, contra Federico Ortiz Valles, Narcisa Peñaranda,
Felipa Quiroga Paco y Lorenzo Vera Meneses. La misma que declaró procedente la tutela
constitucional del ciudadano David Carvajal Villca y dispuso: a) La nulidad e ilegalidad de las
Resoluciones 80/2011 y 81/2011 dictadas por el Concejo Municipal de Yapacaní, b) La
restitución de David Carvajal Villca a su cargo de Alcalde Municipal de Yapacaní, en el plazo
de 48 horas, c) Se ordene el desalojo y retiro inmediato de todas las pseudo autoridades y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 143


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

personas ajenas a la institución apostadas en las oficinas de la sede del Gobierno Municipal
Autónomo de Yapacaní y el cierre temporal de las mismas y sea con resguardo policial (fs. 13).

II.2. El 10 de enero de 2012, el accionante Gustavo Helguero Cuentas en representación de los


accionantes, sin mandato, interpone acción de libertad contra Felipe Antonio Molina Flores, Fiscal
de Materia de Yapacaní y Ramiro Quisbert Chipana, Comandante de la Policía de la provincia Ichilo-
Yapacaní por haber vulnerado el derecho a la libertad de sus representados, deteniéndolos sin
una orden de aprehensión emanada por autoridad competente (fs. 2 a 3 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración del derecho de sus representados a la libertad; por cuanto,
fueron privados de la misma, sin existir mandamiento alguno y estuvieron detenidos por más de
24 horas, sin ser puestos a disposición de la autoridad judicial. En consecuencia, corresponde
dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela
impetrada.

III. 1. De la naturaleza jurídica de la Acción de Libertad

La Constitución Política del Estado instituye la acción de libertad en su art. 125, que señala:
“Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que
es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad
y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde
tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se
restituya su derecho a la libertad”; norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley 27
del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), que dispone: “Es una acción constitucional
extraordinaria de tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de
los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados”.

Por su naturaleza tutelar, la acción de libertad, tiene la finalidad de proteger de forma inmediata
y efectiva los derechos a la vida y la libertad física en los casos en los que sean ilegal o
indebidamente restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión por parte de las
autoridades públicas o particulares.

III.2.De la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

Para que proceda esta acción, el impetrante, deberá considerar que previamente a su
interposición, debe usar los medios de defensa eficaces y oportunos existentes para proteger su
derecho a la libertad supuestamente lesionado, en este sentido la jurisprudencia constitucional, a
través de la SC 0008/2010-R de 6 de abril, establece: “…en caso de existir mecanismos
procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el
derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados
previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará
solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado
estas vías específicas”.

Por lo que, previamente a la interposición de la acción de libertad, el accionante debe utilizar los
mecanismos legales idóneos y eficientes vigentes en el ordenamiento jurídico ordinario, a fin de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 144


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que sean conocidos y restituidos por el juez ordinario, y solo acudir a la vía constitucional
cuando la vulneración del derecho no es restituido por el juez ordinario.

III.3. Sobre los actos del Ministerio Público, Policía Nacional y la posibilidad de
reclamarlos ante el juez cautelar

El accionante alega que sus representados fueron privados de libertad indebidamente,


denunciando actos ilegales por parte del Fiscal de Materia de Yapacaní y del Comandante de la
Policía de la provincia de Ichilo. En este sentido, concierne citar la jurisprudencia constitucional
pronunciada en estos casos.

Conforme a los arts. 54 inc.1) y 279 del CPP, el Juez cautelar es la autoridad encargada del
control jurisdiccional de la investigación y específicamente, de los actos del Ministerio Público
y de los funcionarios policiales, desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa
preparatoria, determinando que toda persona que considere la existencia de una acción u
omisión que vulnere su derecho a la libertad dentro de la investigación, debe acudir ante el
mismo, para pronunciarse sobre la legalidad o ilegalidad de su arresto o aprehensión y ordene lo
que en derecho corresponda; por lo que, sólo en caso que la supuesta lesión no se repare, se
activará esta acción tutelar.

La SC 0054/2010-R de 27 de abril, compatibilizó el referido entendimiento, ante una aparente


ausencia de vía idónea para conocer y resolver las irregularidades denunciadas en los casos en
que el Fiscal no hubiese informado al Juez de Instrucción en lo Penal, sobre investigaciones
iniciadas o denuncia, situaciones en las que expresó que: “…si el fiscal no diera aviso al juez
cautelar, en un evidente incumplimiento de sus deberes, el imputado o detenido no puede
adoptar una actitud pasiva, sino que en resguardo de sus derechos fundamentales debe exigir
que se cumpla con esa comunicación y en caso de que no se hubiese procedido de esa forma,
está plenamente facultado para acudir ante el juez cautelar para que conozca las denuncias o
irregularidades en las que hubiesen podido incurrir el Ministerio Público y los efectivos
policiales, y en su caso, pueda restablecer los derechos presuntamente vulnerados; lo que
implica que, mientras exista la posibilidad de impugnar aprehensiones o detenciones indebidas
ante el juez cautelar y no se advierta que podría existir alguna dilación indebida o injustificada
que agrave la situación del detenido al no conocer y resolver en forma oportuna su situación
jurídica, dicha vía se considera y constituye en la idónea, oportuna y eficaz para conocer esas
situaciones”.

III.4. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el caso en particular, resulta aplicable el razonamiento asumido por la jurisprudencia


constitucional desarrollada en el Fundamento Jurídico precedente. Observando que, el
accionante reclama supuestos actos ilegales de parte del Fiscal de Materia de Yapacaní y del
Comandante de la Policía de la provincia de Ichilo, por haber aprehendido a 28 ciudadanos sin
existir un mandamiento emitido por autoridad competente y haberlos privado de su libertad por
más de 24 horas sin ponerlos a disposición de la autoridad judicial competente.

Sin embargo, se ha establecido que ante la denuncia de la Comandante de la Policía de


Yapacaní, se abrió una investigación a cargo de una comisión de fiscales de Montero, existiendo
una autoridad judicial encargada del control jurisdiccional de la investigación, siendo en este
caso, la mencionada autoridad judicial, la competente para conocer cualquier tipo de vulneración
del derecho a la libertad por parte de los accionantes.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 145


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En este sentido, la parte accionante no puede asumir una conducta pasiva, sino reclamar los
hechos que considera ilegales en la jurisdicción ordinaria, en cumplimiento al principio de
subsidiariedad excepcional que caracteriza a esta acción de defensa. No debiendo recurrir en
forma directa a la vía constitucional, la que es viable únicamente en situaciones en las que,
impugnadas las supuestas ilegalidades, las mismas no sean reparadas por el juez ordinario.

En ese marco, la privación de libertad supuestamente ilegal de la que fueron objeto los
representados del accionante, fue denunciado directamente mediante la presente garantía
jurisdiccional; y no así ante el Juez cautelar, omitiendo de esta manera el rol, las atribuciones y
la finalidad que cumple el juez ordinario penal, obviando el medio legal, eficaz y oportuno que
tenía expedito, y que no utilizó.

Por lo que, corresponde denegar la tutela solicitada a través de esta acción; que por su naturaleza
no opera como un mecanismo subsidiario en la protección de los derechos invocados, situación
que impide realizar el análisis de fondo de la problemática planteada.

En consecuencia el Juez de garantías, al denegar la acción de libertad, ha actuado correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud


de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia de
conformidad con el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión,
resuelve: APROBAR la Resolución de fecha 11 de enero, cursante en fs. 20 a 22, pronunciada por el
Juzgado de Partido y de Sentencia de Yapacaní; y, en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.
Con la aclaración que no se ingresó al análisis de fondo en el presente caso.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0022/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00005-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 01/2012 de 6 de enero, cursante de fs. 16 a 17 vta. pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Abraham Quiroga Bonilla en representación sin
mandato de Genaro Tomás Chiara Mamani contra Valeria Salas Hurtado, Jueza Octava de
Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.
I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 146


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por memorial presentado el 5 de enero de 2012, cursante de fs. 4 a 5 vta., el representante del
accionante en representación sin mandato de su representado expresa los siguientes fundamentos
de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Manifiesta que su representado se encuentra recluido en el Centro de Rehabilitación de Santa


Cruz (Palmasola), y conforme a la normativa procesal penal solicitó audiencia de cesación a la
detención preventiva el 27 de diciembre de 2011, pero recién el 5 de enero de 2012 la Jueza
Octava de Instrucción en lo Penal, Valeria Salas Hurtado, decretó su solicitud señalando
audiencia para el 2 de febrero del mismo año, dicha situación perjudica plenamente a su
representado, originando que se encuentre indebidamente recluido, por lo que la Jueza
demandada al haber señalado una fecha con más de un mes le ocasionaría una detención ilegal,
al no llevar a cabo la audiencia dentro de lo normado por las Sentencias Constitucionales, ya que
a la fecha los derechos a la libertad y locomoción de su mandante se encuentran vulnerados, al
no haber señalado la Jueza mencionada audiencia de cesación de la detención preventiva dentro
de las setenta y dos horas siguientes.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de los derechos de su representado a la libertad y la locomoción, sin


citar los artículos correspondientes de la Constitución Política del Estado.

I.1.3. Petitorio

Solicita que se ordene la celebración y señalamiento de audiencia dentro de las 24 horas,


reivindicando los derechos y garantías constitucionales antes expuestas.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 6 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 15 a
17 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El Secretario del Juzgado de garantías, informó en audiencia sobre la ausencia del abogado
accionante y su representado, así como de la parte demandada, por lo que se dio lectura integra
del memorial de acción de libertad.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

La Jueza Octava de Instrucción en lo Penal cautelar, Valeria Salas Hurtado, a través de informe
escrito cursante de fs. 13 a 14 vta., expresó lo siguiente: i) Dentro de la denuncia penal que sigue
el Ministerio Público y la Defensoría de la Niñez y de la Adolescencia contra el accionante, la
audiencia de medidas cautelares se llevó a cabo el 22 de noviembre de 2011, imponiéndole la
medida extrema de detención preventiva; ii) El hoy accionante planteó acción de libertad ante la
Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, remitiéndose el
cuaderno procesal para su valoración, donde los Vocales lo declararon improcedente y
denegaron la tutela; iii) La parte actora interpuso una recusación, sin los elementos probatorios y
sin cumplir con el mandato del art. 320 del Código de Procedimiento Penal (CPP), habiendo

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 147


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

rechazado in límine la recusación planteada en su contra; iv) El 28 de diciembre de 2011 se


suspendió la audiencia de cesación a la detención preventiva debido a que las partes no fueron
legalmente notificadas debido a que la defensa del imputado no realizó las diligencias
respectivas; v) En la misma fecha la defensa solicitó nuevamente se señale audiencia de
cesación a la detención preventiva, y de acuerdo al rol de audiencias del Juzgado a su cargo se
señaló audiencia para el 2 de febrero de 2012; y, vi) Dicho señalamiento se realizó de acuerdo al
rol de audiencias del juzgado y conforme a la recarga procesal existente.

I.2.3. Resolución

Saúl Saldaña Secos, Juez Séptimo de Partido de Sentencia y Penal - Liquidador del Tribunal
Departamental de Justicia de Santa Cruz, pronunció la Resolución 01/2012 de 6 de enero,
cursante de fs. 16 a 17 vta., concediendo la tutela solicitada por el accionante sin disponer su
libertad, determinando que la Jueza demandada señale nueva audiencia para considerar la
cesación de la detención preventiva con los siguientes fundamentos: a) Dentro de los postulados
constitucionales previstos en la Constitución Política del Estado, se encuentra el principio de
celeridad, lo que significa que el sujeto procesal debe tener una pronta respuesta a sus
planteamientos, donde se dilucidara positiva o negativamente su petitorio; b) En el caso
presente, el término para la audiencia de cesación a la detención preventiva es demasiado largo
no siendo óbice el hecho de tener muchas audiencias señaladas; c) La jurisprudencia determina
que tratándose de petitorios donde se encuentra en juego la libertad, el juez tiene la obligación
de señalar audiencia dentro del termino máximo de 72 horas; y, d) Todo lo referido, se equipara
a la acción de libertad, por lo que el juez o tribunal que conoce el asunto debe llevarla a cabo
dentro de las 24 horas, dejando de lado cualquier otra audiencia.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:


II.1. Se evidencia que a través del memorial de 27 de diciembre de 2011, el representado del
accionante solicitó audiencia de cesación a la detención preventiva, memorial que fue
recepcionado el 28 del mismo mes y año (fs. 2 vta.).
II.2. Mediante decreto de 29 de diciembre de 2011, la jueza Octava de Instrucción en lo Penal,
señaló audiencia para la consideración de la cesación a la detención preventiva del imputado,
para el día jueves 2 de febrero de 2012 (fs. 3).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante por su representado, denuncia la vulneración de los derechos de su defendido a la


libertad y la locomoción, debido a que su solicitud de 28 de diciembre de 2011, solicitando
audiencia de consideración de cesación a la detención preventiva, fue dispuesta por la Jueza
Octava de Instrucción en lo Penal, para el 2 de febrero de 2012, realizando un señalamiento con
más de un mes de retraso, y no dentro de las setenta y dos horas, ocasionándole a su
representado una detención por más de ilegal.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


libertad, precisando: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 148


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad” (art. 125).

Asimismo, la SC 2209/2010-R de 19 de noviembre expresa que: “Este mecanismo


extraordinario de protección, se halla consagrado en el art. 125 de la CPE, como una acción
jurisdiccional de rango constitucional que está destinada a la defensa y protección del derecho
a la vida y a la libertad personal, manteniendo su fin esencial tal cual es, ser una acción tutelar
preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza sobre todo el
derecho a la libertad personal y ampliando su núcleo esencial y otorgando un paraguas más
amplio, protegiendo el derecho a la vida, siempre y cuando ésta esté relacionada con el derecho
a la libertad; asimismo, restablece lesiones a la garantía del debido proceso cuando existe un
nexo directo con este derecho, es decir, que el acto ilegal que se demanda, esté interconectado
con la amenaza o restricción o supresión de este derecho”.

Complementando los alcances de esta acción tutelar, el Tribunal Constitucional a través de la SC


0023/2010-R de 13 de abril, señaló que: “…la nueva Constitución Política del Estado, es más
amplia en cuanto a su ámbito de protección, pues éste se extiende al derecho a la vida, y en
cuanto al derecho a la libertad, en ambos casos, de manera expresa en la Constitución Política
del Estado vigente, la protección está destinada al derecho a la libertad física o personal…”

III.2. En cuanto a la celeridad en el trámite de la cesación de la detención preventiva

El art. 178.I de la Constitución Política del Estado (CPE), establece que: “La potestad de
impartir justicia emana del pueblo boliviano y se sustenta en los principios de independencia,
imparcialidad, seguridad jurídica, publicidad, probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo
jurídico,…”, o sea que el impartir justicia se encuentra regida por estos principios. En
concordancia con esta disposición, el art. 115.II de la CPE, establece que: “El Estado garantiza
el derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita,
transparente y sin dilaciones” (las negrillas son nuestras); de lo expuesto, la administración de
justicia, debe ser rápida y eficaz, tanto en la tramitación como en la resolución de las causas,
más aún cuando se encuentra comprometido el derecho a la libertad, donde los ciudadanos por la
naturaleza del mismo, esperan una pronta definición de su situación jurídica.…

Al respecto, el Tribunal Constitucional de Bolivia, través de la SC 0078/2010-R de 3 de mayo,


complementado por la SC 0384/2011-R de 7 de abril, señaló que: “La solicitud de cesación de
detención preventiva prevista por el art. 239 del CPP, está regida por el principio de celeridad
procesal”, y como fundamento jurídico indicó que: “Bajo la égida que el derecho a la libertad
ocupa un lugar importante, junto a la dignidad humana en el catálogo de derechos civiles como
parte integrante a su vez de los derechos fundamentales, tal cual lo establece el art. 22 de la
CPE al señalar que: 'La dignidad y la libertad de la persona son inviolables. Respetarlas y
protegerlas es deber primordial del Estado', norma que debe ser interpretada en base a los
valores de la misma Constitución, la cual en el art. 8.II establece que el Estado se sustenta en
los valores de dignidad y libertad, entre muchos otros; se debe tener en cuenta que la
restricción o límite al derecho a la libertad física en materia penal, con carácter provisional o
cautelar, conforme a los requisitos constitucionales y legales, tienen naturaleza instrumental y
por ende modificable.
“…es preciso puntualizar que la detención preventiva, no tiene por finalidad la condena
prematura, por cuanto la presunción de inocencia, sólo es desvirtuada ante un fallo
condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su imposición como medida precautoria
está sujeta a reglas, como también su cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no
existe una norma procesal legal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 149


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

realizarse la audiencia de consideración, corresponde aplicar los valores y principios


constitucionales, previstos en el ya citado art. 8.II de la CPE, referido al valor libertad
complementado por el art. 180.I de la misma norma constitucional, que establece que la
jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad entre otros; motivo
por el cual toda autoridad jurisdiccional que conozca una solicitud de un detenido o privado
de libertad, debe tramitar la misma, con la mayor celeridad posible, y dentro de los plazos
legales si están fijados, y en un plazo razonable, si no está establecido por ley. De no ser así,
tal actuación procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del detenido y en
consecuencia repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por la sola
privación de libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que
necesariamente se deba deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado
oportunamente a fin de que obtenga una respuesta positiva o negativa” (las negrillas nos
corresponden).

En base a ello, estableció subreglas al indicar que: “En consecuencia, se considera acto
dilatorio en el trámite de la cesación de la detención preventiva, cuando:
a) En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, se
dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por ley.
b) Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o prudencial. Plazo que
puede ser en un límite de tres o cinco días máximo, dependiendo de la particularidad de cada
caso, cuando por ejemplo existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan que
ser notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado acto previo y
esencial -como sucede con algunas notificaciones-, o que el juzgado esté de turno, etc. Con la
excepción única y exclusiva en los casos que exista complejidad por la naturaleza propia y la
relevancia del proceso, como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a la
petición; situación que deberá ser justificada por la autoridad judicial competente al momento
de señalar la fecha de audiencia, teniendo en cuenta la razonabilidad (negrillas añadidas).
c) Se suspende la audiencia de consideración, por causas o motivos que no justifican la
suspensión, ni son causales de nulidad. Tal el caso de la inasistencia del representante del
Ministerio Público o de la víctima y/o querellante, si es que han sido notificadas legalmente y
no comparecen a la audiencia. En el caso del Ministerio Público al estar regido por el principio
de unidad tiene los medios para asistir a través de otro fiscal, y en cuanto al querellante al ser
coadyuvante y estar notificado, su participación es potestativa en dicho acto, y por ende, su
inasistencia no vincula a la autoridad jurisdiccional al estar cumplida la formalidad. No
obstante, en caso de que la suspensión se deba a la falta de notificación o a la inasistencia del
propio imputado, no existe dilación indebida ni afectación a derecho alguno, en cuyo caso
deberá fijarse nueva fecha de audiencia conforme a las directrices expuestas”.…
.
No obstante, dada la problemática planteada y la necesidad procesal de dar respuesta a la misma,
cabe señalar que el principio de celeridad no comprende el conocimiento del trámite de cesación
de detención preventiva hasta llevar a cabo la audiencia; sino también en forma posterior, como
ser el dar curso con la debida celeridad procesal al trámite de apelación de la resolución
respectiva, en los casos que corresponda.
Por ello, resulta necesario complementar las subreglas establecidas en la SC 0384/2011-R,
citada precedentemente, en sentido de que: “…se considera acto dilatorio en el trámite de la
cesación de la detención preventiva:…” (las negrillas nos corresponden); también cuando:
Interpuesto el recurso de apelación contra la resolución que rechaza la solicitud de cesación de
detención preventiva, los antecedentes de la apelación no son remitidos por el juez a quo dentro
del plazo legal de veinticuatro horas establecido por el art. 251 del CPP -salvo justificación
razonable y fundada- ante el tribunal de apelación, o se imprima un procedimiento o exigencias
al margen de la ley.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 150


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Del entendimiento esgrimido, se tiene que, en aquellos casos donde se verifique la existencia de
dilación o una retardación injustificada, corresponderá otorgar la tutela solicitada, por cuanto
ello repercute en el derecho a la libertad física del agraviado.

III.3. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes del cuaderno procesal, se tiene que el accionante por su
representado denuncia que su solicitud de audiencia para la consideración de cesación a la
detención preventiva fue señalada por la Jueza Octava de Instrucción en lo Penal, fuera de los
plazos determinados por la Norma Procesal Penal, verificándose que el memorial de solicitud
fue presentado el 28 de diciembre de 2011, y el decreto de 29 del mismo mes y año cursante a
fs. 3, señala como fecha de audiencia el día jueves 2 de febrero de 2012, es decir que el
representado del accionante tiene que esperar 35 días, para la realización de la audiencia
referida, en la que recién se definirá su situación jurídica.

Como se puede apreciar la autoridad judicial, con dicho señalamiento, ha vulnerado el principio
procesal de celeridad que caracteriza a la justicia ordinaria como determina el art. 180 de la
CPE, justificativo expuesto por la Jueza demandada en el sentido que la fecha de audiencia fue
establecida conforme al rol de audiencias del Juzgado, no eximiéndole de la responsabilidad que
tiene como directora funcional del proceso de velar por el correcto desarrollo del mismo, puesto
que dicha solicitud tiene relación directa con la libertad del representado del accionante,
debiendo actuar con preferencia en el caso presente, programando la audiencia dentro de los
plazos razonables que la jurisprudencia y la norma procesal establecen, es decir con un máximo
de setenta y dos horas de presentada la solicitud, determinando en la misma si la solicitud del
representado del accionante procede para la cesación de la detención preventiva.

Por los fundamentos anotados, el Juez de garantías al conceder la tutela impetrada a través de la
presente acción de defensa, obró correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la
Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: CONCEDER la
tutela solicitada, en los términos dispuestos por el Juez de garantías.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0023/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de Libertad
Expediente: 00009-2012-01-AL
Departamento: La Paz

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 151


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución 01/2012 de 11 de enero, pronunciada dentro de la acción de libertad


interpuesta por Willson Roque Altamirano Ramos contra Frida Choque de Claros, Fiscal de
Materia de turno de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) de la ciudad de
La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Willson Roque Altamirano Ramos interpuso acción de libertad oral ingresado el 10 de enero de
2012 a horas 9:43 y recepcionado en el Juzgado Quinto de Sentencia, en la misma fecha a horas
10:30 consignándose únicamente “detención indebida” dando lugar a que la Jueza Quinta de
Sentencia Lucia Fuentes Nina señale audiencia para el día miércoles 11 de enero de 2012 a horas
16:00 (fs. 4 y vta.) en atención a la SC 0128/2011-R de 21 de febrero.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerados sus derechos a la libre locomoción y a la libertad, sin citar norma
constitucional.

I.1.3. Petitorio

No consta petitorio expreso alguno.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública fue celebrada el 11 de enero de 2012, según consta en el acta que cursa en
obrados de fs. 25 a 28, en la que se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante sostuvo que a raíz de un problema provocado por la ex-cónyuge de su
representado el mismo fue arrestado por funcionarios policiales del módulo policial de la zona de
San Pedro, siendo conducido a instalaciones de conciliación policial ubicado en la calle Pando,
para luego ser trasladado a la FELCC donde la Fiscal de Materia, Frida Choque de Claros
discrecionalmente modificó su estatus de arrestado por la de aprehensión, sin que haya emitido
resolución fundamentada alguna, alegando la existencia de flagrancia para después de
aproximadamente 18 horas presentar imputación formal ante el juez cautelar; por lo que, en su
criterio se vulneró la liberad y el debido proceso. Asimismo, indicó que su representado fue
aprehendido únicamente por la declaración de la supuesta víctima situación extraña por que
cualquier otro fiscal mínimamente ante la falta del médico forense o de otro testigo, habría
dispuesto que su representado se presente al día siguiente para que preste su declaración y la
victima presente su certificado médico correspondiente.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

La Fiscal de Materia de la ciudad de La Paz, Frida Choque de Claros, sostuvo que en el caso
concreto en virtud a la acción directa existe flagrancia y suficientes elementos sobre su autoría en
los delitos de lesiones graves y leves.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 152


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Resolución

Lucia Fuentes Nina, Jueza Quinta de Sentencia constituida en Jueza de garantías, por Resolución
001/2012 de 11 de enero de 2012, cursante de fs. 29 a 30, denegó la tutela, con el fundamento de
que Willson Roque Altamirano Ramos luego de ser aprehendido fue puesto a disposición de
autoridad judicial competente por lo que antes de interponer la acción de libertad, debió agotar las
vías ordinarias expeditas, es decir reclamar ante la jueza contralora de garantías constitucionales
los hechos denunciados.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

En vigencia de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se realizó el sorteo del presente
proceso el 15 de febrero de 2012, por lo que el pronunciamiento de la sentencia se encuentra dentro
de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. El 9 de enero de 2012 el Sub Oficial Primero Wenceslido Limachi Ticona y el Cabo Javier
Quino Heredia, se hicieron presentes en el Callejón Canónigo Ayllón 799 por la denuncia de
Evelin Ralde García, quien refería haber sido agredida verbal y físicamente, procediéndose al
arresto de Altamirano Ramos “Wilson” Willson Roque, conforme se tiene del Informe de
Intervención Policial Preventiva - Acción Directa (fs. 8 y vta.), para luego disponerse por la Fiscal
de Materia. Frida Choque de Claros su aprehensión (fs. 8 y vta.) situación que puede evidenciarse
además del requerimiento de dicha Fiscal al Médico Forense de turno donde se pide la revisión
médica de Evelin Ralde García “…sea en gratuidad ya que el presunto agresor se encuentra
aprehendido”.

II.2. A horas 20:40 del 9 de enero de 2012, se procedió a tomar la declaración a Wilson “Willson”
Roque Altamirano Ramos en presencia de su abogado, el asignado al caso y la Fiscal de Materia a
cargo (fs. 12 y vta.), donde presenta copias de: Una demanda de asistencia familiar, denuncia de
abandono de familia (fs. 13 y vta.); amenazas y coacción interpuesto al Fiscal de Materia de turno
de la ciudad de La Paz (fs. 14 a15) y un certificado policial que refiere no tener antecedentes
penales (fs. 18) entre otros.

II.3. Certificado Médico Forense otorgado por Ana Rosario Peducasse Murillo que “…estima
incapacidad por seis días” de Ana Ralde García; e imputación formal de Frida Choque de Claros
como Fiscal de Materia en contra de Willson Roque Altamirano Ramos, por el supuesto delito de
Lesiones Graves y Leves con cargo de presentación de 10 de enero de 2012 a horas 15:42.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante a través de su representante manifiesta que fue arrestado por policías a raíz de un
altercado con su ex-cónyuge y que la fiscal demandada indebidamente modificó su estatus de
arrestado por la de aprehendido sin emitir resolución fundamentada alguna para luego de
aproximadamente 18 horas recién presentar imputación formal al Juez cautelar. En consecuencia,
corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la
tutela solicitada.

III.1. El informalismo en la presentación de demandas de acción de libertad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 153


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La jurisprudencia del Tribunal Constitucional contenida en la SC 0337/2010-R de 15 de junio, a


propósito del nuevo texto constitucional del año 2009, sostuvo que la acción de libertad se caracteriza
por: “…1) El informalismo, por la no exigencia de requisitos formales para su presentación; 2) La
inmediatez, por la urgencia en la protección de los derechos que tutela; 3) La sumariedad, por el
trámite caracterizado ampliamente por la celeridad que le corresponde; 4) La generalidad, pues no
reconoce ningún tipo de privilegio, prerrogativas o inmunidades; y, 5) La inmediación, puesto que en
este nuevo contexto, se requiere que la autoridad judicial competente tenga contacto con la persona
privada de libertad”; mientras que la SC 0044/2010-R de 20 de abril, sostuvo que el nuevo texto
constitucional acentúa dichas características ya consignadas en el anterior diseño constitucional es decir:
“…1. El informalismo… se amplía la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, que
antes estaba reservada sólo a los supuestos en que la persona fuera menor de edad o incapacitada,
analfabeta o notoriamente pobre y; 2. La inmediación, ya que; la CPE señala que la autoridad
judicial, una vez presentada la acción, debe disponer que el accionante sea conducido a su
presencia o acudir al lugar de la detención, última posibilidad que no estaba contemplada en la
Constitución abrogada y que es fundamental para comprobar las condiciones en que la persona se
encuentra privada de libertad, especialmente cuando existe denuncia de torturas, tratos crueles,
inhumanos o degradantes, o si se ha vulnerado el derecho a la integridad física o existe amenaza a
su vida…”.

Respecto al principio de informalismo que rige a la acción de libertad se deriva de la propia:


“…relevancia de los derechos que tutela, es decir la libertad y la vida, ésta última protegida cuando
se relaciona con la libertad aspecto que... (incluso)… permite al juez constitucional resolver de
acuerdo al principio “iura novit curia” excluyéndose así la aplicación del principio de congruencia
en este tipo de acciones constitucionales” (Boris Arias, El informalismo en la acción de libertad,
2011, p.1) y en este marco la SC 0128/2011-R respecto a la posibilidad de presentar oralmente una
acción de libertad sostuvo que: “…la acción de libertad, también puede ser presentada oralmente;
empero, ello no significa que no se deba tener un registro de dicha actuación oral, pues si bien
prima la oralidad por encima de la escritura, se debe tener en cuenta la necesidad procesal de
registrar el acto ilegal denunciado; es decir, qué y a quién o a qué autoridades -así no se conozca
el nombre- pero se identifique el o los hechos y las circunstancias del acto acusado de ilegal, por
el que se solicita la tutela a sus derechos. En síntesis si se registra la denuncia o demanda oral,
esta actuación servirá de instrumento procesal para: 1) El accionante, a objeto de que sea
escuchado debidamente en lo que pretende hacer valer dentro de la acción tutelar; 2) El
accionado o demandado, a objeto de que preste su informe y asuma defensa, dado que la
otorgación de tutela genera responsabilidad civil y penal, inclusive; y, 3) Para el juez o tribunal
de garantías, a objeto de que falle con certeza y objetividad, pues en base al registro de la
denuncia efectuada en la acción de libertad, que bien puede o no, ser ampliada en audiencia,
analizará el fondo de la problemática constitucional a dilucidar, como también verificará si
amerita o no exigir cierta presentación de prueba a personas o instituciones que tengan la
información pertinente y que le dé mayores luces en un plano de objetividad y celeridad, pero
sobre todo de justicia; pues debe tenerse en cuenta que el art. 115.II de la CPE, establece que 'El
Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia plural, pronta,
oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones'; debido proceso que también es aplicable al
ámbito procesal constitucional

En consecuencia, tratándose de la presentación oral de la acción de libertad, el procedimiento a


seguir es el siguiente:

El secretario o actuario del juzgado o tribunal donde se sorteó la acción de libertad, deberá sentar
en acta la demanda verbal de la acción de libertad, haciendo una relación del lugar, hechos,
fechas, nombres, cargos, derechos lesionados, petitorio y demás datos que pudiere dar y/o

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 154


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

identificar en ese momento. No obstante, en caso de que el accionante no proporcione los datos
necesarios, debe labrarse el acta con los datos que se tengan, así sean mínimos.
A cuyo efecto anualmente, se abrirá un 'Libro de presentación oral de Acción de Libertad', y que
en cada acta constará el lugar, fecha y hora, como también el nombre y la firma del presentante,
si lo hace por sí, o por otro con o sin mandato.
Asimismo, a momento de la citación a la persona, autoridad o funcionario demandado, se le
entregará una copia del acta; o, en su defecto se le hará constar que la acción tutelar fue
presentada en forma oral, cuyo registro cursa en el respectivo Libro del juzgado o tribunal de
garantías” (las negrillas y subrayado es nuestro).

Al presente corresponde complementar la jurisprudencia contenida en la SC 0128/2011-R de 21 de


febrero, bajo los siguientes términos:

a) En provincias y en general en lugares en los cuales exista un sólo juzgado o tribunal competente
penal, la interposición verbal de una acción de libertad, deberá efectuarse directamente ante el
mismo debiendo el secretario inmediatamente, en el marco del principio de informalismo y en la
medida de lo posible, efectuar el registro en un acta de los datos esenciales y en su caso generales
de ley de la parte accionante y de la parte accionada además de los hechos relevantes a la acción de
libertad a efectos de efectuar la correspondiente notificación a la parte demandada con dicha acta.

b) En capitales de departamento o en centros judiciales que cuenten con mecanismos de sorteo


digital o de otro tipo, la interposición verbal de la acción de libertad deberá efectuarse por
ventanilla, oficina o su equivalente, debiéndose de forma inmediata registrar dicha acción de
libertad, los datos o generales de ley de la parte accionante y de ser posible de la parte accionada,
además del nombre de la persona que presente con o sin representación la acción de libertad a
efectos de la responsabilidad y una vez sorteado o definido el juzgado o tribunal penal competente
la parte accionante o su representante con o sin mandato, deberá dirigirse a la secretaria del
juzgado o tribunal penal competente a efectos del registro correspondiente para que en el marco del
principio de informalismo y en la medida de lo posible, efectúe el registro en un acta de los datos
esenciales y en su caso generales de ley de la parte accionante y de la parte accionada además de
los hechos relevantes a la acción de libertad a efectos de efectuar la correspondiente notificación a
la parte accionada con dicha acta.

c) La presentación de la acción de libertad verbal o escrita puede efectuarse por el directamente


afectado en sus derechos o por un tercero con o sin representación, aclarándose que en todo caso
cuando una persona privada de libertad manifieste su voluntad de plantear esta y no cuente con una
tercera persona para que la interponga a su nombre, la autoridad a cargo de su custodia deberá de
inmediato labrar un acta y presentar la misma a la autoridad penal competente para el
conocimiento de la misma.

d) Asimismo, a efectos del presente razonamiento debe dejarse establecido que la diferencia entre
acciones de libertad verbales y escritas es material más que formal; es decir, se encuentra en la
posibilidad de identificar: 1) La relación circunstanciada del o de los hechos denunciados; 2) La
identidad del o de la accionante; y, 3) La identidad de la parte demandada. En este contexto, a
efectos de la elaboración del acta de presentación, incluso cuando se presente un documento que
contenga la acción de libertad pero la o el funcionario que proceda a su registro denote la
imposibilidad de identificar alguno de esos elementos, seguirá considerando a la acción de libertad
como verbal por lo que dicho funcionario procederá a efectuar el sorteo para inmediatamente
después el secretario del juzgado o tribunal sorteado levante el acta respectiva que precise o
complemente en la medida de lo posible y en el marco del informalismo dichos elementos, esto
con el fin de notificación y en definitiva preservar el derecho a la defensa de la parte accionada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 155


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

e) Ante la interposición de una acción de libertad verbal conforme el procedimiento referido más
adelante, el secretario del juzgado o tribunal penal competente deberá levantar un acta en el “Libro
de presentación oral de Acción de Libertad“ en la cual consigne los datos o en su caso generales de
ley de la parte actora, en la medida de lo posible los datos o en su caso generales de ley de la parte
accionada y la relación circunstanciada de los hechos que no sólo busca facilitar la labor del juez o
tribunal sino preservar el derecho a la defensa de la parte accionada fundamentalmente en casos de
notoria complejidad por la cantidad de detenidos, de temas en debate, etc. En todo caso, de no ser
posible dejar constancia de los referidos datos y de los hechos circunstanciados, en el acta
levantada en el “Libro de presentación oral de Acción de Libertad“ deberá dejarse constancia de la
imposibilidad que impide dicho registro.

f) En todo caso la inobservancia a las reglas establecidas en la presente Sentencia determinará que
el Tribunal Constitucional Plurinacional corrija el procedimiento, salvo que no se hubiere
provocado la indefensión a la parte accionada o cuando este Tribunal, en el marco del
informalismo que rige a la acción de libertad, encuentre que de todas formas procederá la
denegación de la tutela, independientemente de la responsabilidad funcionaria que pueda generar la
inobservancia del entendimiento asumido.

En el presente caso ante la interposición verbal de la acción de libertad por parte del accionante, se
procedió a registrar únicamente la identidad de la parte actora, la parte demandada y en derechos
vulnerados “detención indebida - libre locomoción - libertad” con lo que se procedió a notificar a
la parte accionada sin efectuarse mayor precisión de los hechos que dieron lugar a dicho
planteamiento, cuando conforme a lo referido anteriormente, en lo posible y de poder efectuarse, es
menester dicha precisión, pese a ello en el caso concreto la autoridad demanda en audiencia
procedió a ejercer defensa sin afectarse por ello el debido proceso que rige a los procedimientos
constitucionales por lo que atendiendo a las características del caso, no corresponde corregir
procedimiento.

III.2. La excepcional aplicación del principio de subsidiariedad en acciones de libertad

La SC 0160/2005-R de 23 de febrero, estableció la regla general en sentido de que: “…la


existencia de la garantía constitucional en análisis, no implica que todas las lesiones al derecho a
la libertad tengan que ser necesariamente reparadas de manera exclusiva y excluyente a través del
hábeas corpus -ahora acción de libertad-; pues no se trata de una garantía que tenga la vocación
de reparar, en exclusiva, todas las formas de lesión a la libertad que pudieran invocarse, sino la
de dotar a la persona de un medio de defensa sencillo, eficaz y oportuno, para restablecer la
lesión sufrida.

En consecuencia, en los supuestos en que la norma procesal ordinaria de manera específica


prevea medios de defensa eficaces y oportunos para resguardar el derecho a la libertad
supuestamente lesionado, estos deben ser utilizados, previamente, circunstancia en la que
excepcionalmente, el recurso de habeas corpus operará de manera subsidiaria”.

Posteriormente, la SC 0181/2005-R de 3 de marzo, precisó que: “…todo imputado que considere


que en el curso del proceso investigativo ha sufrido una lesión de un derecho fundamental, entre
ellos, el derecho a la libertad en cualquiera de las formas en que pueda sufrir menoscabo, debe
impugnar tal conducta ante el juez instructor, que es el órgano jurisdiccional que tiene a su cargo
el control de la investigación, desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa
preparatoria. Así, el Código de procedimiento penal al prever la existencia de un órgano
jurisdiccional competente para conocer y resolver de manera directa y expedita, las supuestas
vulneraciones a los derechos y garantías que pudieran tener origen en los órganos encargados de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 156


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la persecución penal; no resulta compatible con el sistema de garantías previsto en el


ordenamiento aludido, acudir directamente o de manera simultánea a la justicia constitucional,
intentando activar la garantía establecida por el art. 18 constitucional -ahora art. 125 de la
Constitución Política del estado vigente -, ignorando los canales normales establecidos.
Consiguientemente, el hábeas corpus -ahora acción de libertad- sólo se activa en los casos en que
la supuesta lesión no sea reparada por los órganos competentes de la jurisdiccional ordinaria
aludidos”.

En vigencia ya de la Constitución Política del Estado del año 2009 dicho razonamiento fue acogido
por la SC 0008/2010-R de 6 de abril, que estableció que: “…en caso de existir mecanismos
procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el
derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados
previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará
solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado
estas vías específicas” y por la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, donde el Tribunal Constitucional
para evitar la desnaturalización de la acción de libertad y guardar equilibrio, y complementariedad
entre jurisdicción constitucional y ordinaria entre los supuestos de improcedencia de la acción de
libertad estableció que: “Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía
cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía
no existe aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez Cautelar
de turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el
aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella
donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De no ser así, se
estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a través del legislador
le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en el control de la
investigación”.

III.3. Análisis del caso concreto

En el presente caso el accionante sostuvo que fue arrestado por policías a raíz de un altercado que
tuvo con su pareja, y la Fiscal demandada discrecionalmente modificó su estatus de arrestado por
el de aprehendido y que luego de aproximadamente 18 horas, se procedió a presentar imputación
formal en su contra; sin embargo, conforme el propio abogado de la parte accionante aseveró en la
audiencia de la acción de libertad, se tiene que la fiscal demandada: “…horas después del medio
día, a presentado una imputación formal en demandas nuevas del Tribunal Departamental de
Justicia, esta imputación ha sido sorteada al Juzgado Cuarto de Instrucción en lo Penal a cargo de
Margot Pérez Montaño, esta Autoridad por sus recargadas labores ha dispuesto audiencia para el
día de hoy a horas 11:30 de la mañana, en audiencia que se ha conocido la imputación, no se
estableció flagrancia y la Jueza ha determinado medidas sustitutivas para el señor Altamirano…”
lo que concuerda con el informe de la fiscal demandada; es decir, conforme la jurisprudencia
referida en el punto III.2 de la presente resolución el accionante impulsado por su propio interés
debió plantear sus reclamos ante la Jueza de Instrucción en lo Penal competente que se constituye
en la jueza natural para que en el ejercicio de su competencia conforme a los arts. 54 inc.1) y 279
del Código de Procedimiento Penal (CPP) proceda a resolver con la debida fundamentación las
observaciones y quejas formuladas por el accionante contra la fiscal demandada, subsidiariedad
exigible incluso cuando el fiscal omite comunicar el inicio de la investigación al juez cautelar en
cuyo caso el imputado privado de su libertad debe acudir al juez cautelar de turno previamente a
interponer la acción de libertad.

En consecuencia el Juez de garantías, al denegar la acción tutelar, aunque con otros fundamentos,
obró correctamente.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 157


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, resuelve:

1º DENEGAR la tutela impetrada, con la aclaración de que no se ingresó al análisis de fondo de la


problemática planteada; y,

2º Disponer, que por Secretaría General, se envié copia de la presente Sentencia Constitucional
Plurinacional a Tribunales Departamentales de Justicia de todo el país, a objeto de que tomen
conocimiento, de las complementaciones efectuadas a la SC 0128/2011-R de 21 de febrero, a
través de esta Resolución.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0024/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMER ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Dr. Efren Choque Capuma
Acción de libertad
Expediente: 00052-02-2012-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 14/2012 de 27 de enero, cursante de fs. 37 a 38 vta., pronunciada ,


dentro de la acción de libertad interpuesta por Nicolasa Benito Cuti contra Rafael Alcón Aliaga,
Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal de El Alto del Tribunal Departamental de Justicia de
La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por denuncia verbal presentada el 26 de enero de 2012, cursante a fs. 7, que si bien no cuenta con
una demanda; empero, en audiencia se expuso los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por lo relatado en audiencia se tiene que el abogado de la accionante, manifestó: a) El proceso


penal seguido por el Ministerio Público contra Nicolasa Benito Cuti, data de aproximadamente dos
años atrás, durante los cuales se presentaron una serie de actos dilatorios y omisiones tanto del
Ministerio Público como del órgano jurisdiccional; b) Inicialmente el proceso radicó en el Juzgado
Tercero de Instrucción en lo Penal, donde en cuatro oportunidades la cesación a su detención
preventiva, todas negadas; finalmente, se fijó audiencia con posterioridad a un acto conclusivo, lo
que motivó la recusación de dicha autoridad; c) Radicada la causa en el Juzgado Cuarto de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 158


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Instrucción, solicito cesación de su detención preventiva, acto procesal fijado para el 12 de julio de
2011, que no se llevó acabo debido a la existencia de vicios de nulidad. Reiteró su petición, que fue
respondió por decreto de 14 de igual mes y año, que ratifica que previamente debían subsanarse los
defectos procesales. Recalca, que los rechazos no fueron resueltos en audiencia sino por simples
decretos; d) Mediante providencia de 26 de agosto de ese año, se señaló audiencia para el 7 de
septiembre del mismo año, sin considerar el plazo razonable establecido por la “SC 078/2011”,
vulnerando los derechos de la accionante la celeridad y libertad; acto procesal que tampoco se
desarrolló; e) Planteó incidente de actividad procesal defectuosa y exclusión probatoria, solicitando
la nulidad de obrados, y al mismo tiempo pidió audiencia de cesación a su detención preventiva; f)
El 16 de noviembre de igual año, se fijó audiencia para el 25 de ese mes, diferida para el 13 de
diciembre, luego para el 21 del mismo mes, sin realizarse ninguna de ellas. Habiéndose ratificado
se resuelva el incidente planteado, fijándose audiencia para el 6 de enero de 2012; g) El Juez
demandado, condicionó su solicitud de cesación a su detención preventiva a que previamente se
subsanen defectos procesales; empero, dispuso la nulidad de los actos conclusivos erróneamente
presentados por el Ministerio Público; h) El 9 de enero del indicado año, reiteró su petición,
programándose para el 23 del mismo mes, que resultó ser feriado; por decreto de 26 de ese mes, sin
pronunciarse sobre la solicitud de cesación de la detención preventiva, señaló audiencia para el 2
de febrero, refiriendo que se encuentra sujeto al procedimiento inmediato por flagrancia; i) La
autoridad demandada no consideró que la audiencia para resolver la cesación a la detención debe
realizarse en el término de tres a cinco días, según estableció la “SC 038/2010”; j) Al Ministerio
Público, le corresponde disponer audiencia de procedimiento inmediato, dado que hasta la presente
fecha la accionante no fue notificada con la acusación, ni las pruebas, desconociendo el delito que
se le atribuye, la sanción y la pena requerida; k) Los actos en que incurrió el Juez demandado y el
Ministerio Público, vulneran los derechos de su cliente, a la “certidumbre jurídica” y a la celeridad;
l) Dada la dilación sin fundamento legal y la ausencia de señalamiento de audiencia, hasta el
momento, no cuenta con fecha cierta para considerar y resolver su solicitud de cesación a la
detención preventiva, conculcándose los principios de legalidad y certidumbre jurídica;

I.1.2. Derechos y principio supuestamente vulnerados

La accionante alega la vulneración de sus derechos a la libertad, a la “seguridad jurídica", al debido


proceso, a la defensa y una “justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin
dilaciones” y al principio de celeridad, al efecto cita los arts. 8.II, 22, 115.II, 125 y 180.I de la
Constitución Política del Estado (CPE), (fs7).

I.1.3. Petitorio

Con estos antecedentes, la accionante solicita se ordene al Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal,
se pronuncie sobre su petición de cesación a su detención preventiva.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 27 de enero de 2012, en presencia de la accionante asistida de su


abogado y del representante del Ministerio Público, no así el Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal de El Alto, según consta en el acta cursante de fs. 33 a 36 vta., se produjeron los siguientes
actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la accionante, fundamentó oralmente la presente acción de libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 159


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Rafael Alcón Aliaga, Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal de El Alto, no concurrió a la


audiencia, empero, presentó informe escrito cursante de fs. 13 a 14 vta., indicando: 1) El proceso
penal seguido en contra la accionante, está inmerso dentro del procedimiento inmediato por delitos
flagrantes, que culminó con una acusación formal por la presunta comisión del delito de tráfico de
sustancias controladas, por cuanto, ya no puede referirse a una etapa preparatoria, dado que no está
comprendida dentro del procedimiento especial; 2) De acuerdo al art. 393ter.4 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), incorporado por la Ley 007 de 18 de mayo de 2010, para disponer la
detención preventiva por delitos flagrantes basta con demostrar uno de los requisitos previstos en el
art. 233 del Código de Procedimiento Penal, por cuanto la defensa deberá enervar los demás
requisitos establecidos en la referida disposición legal para beneficiarse con la cesación a la
detención preventiva; 3) A partir del 5 de julio de 2011, la causa radica provisionalmente en su
despacho por efecto de la recusación planteada contra la Jueza Tercero de Instrucción en lo Penal,
transcurriendo más de seis meses sin que el Tribunal superior se hubiere pronunciado sobre la
misma. En ese lapso, la defensa promovió una serie de incidentes, resueltos en su debida
oportunidad en observancia de los principios de igualdad y seguridad jurídica, inclusive se saneó el
proceso conforme se pidió; 4) Señaló audiencia de preparación de juicio inmediato para el 2 de
febrero del citado año, a horas 10:00, debido a que el Ministerio Público presentó acusación contra
la accionante, oportunidad en la que las partes podrán observar la misma, deducir excepciones y
otros medios de defensa conforme el art. 393quater del CPP; y, 5) Solicitó se rechace la denuncia
formulada y sea con las formalidades de rigor, por ser impertinente.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez Segundo de Partido y Sentencia de El Alto, constituido en Juez de


garantías, pronunció la Resolución 14/2012 de 27 de enero, cursante de fs. 37 a 38 vta.,
concediendo la tutela solicitada, y sin disponer la libertad, ordeno que el Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal, señale audiencia de cesación de la detención preventiva en el plazo de
setenta y dos horas hábiles y sea previa notificación al Fiscal e impuso costas, con los siguientes
fundamentos: i) La causa se encuentra bajo conocimiento provisional del Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal, a partir del 5 de julio de 2011, periodo en el cual dictó la Resolución
365/2011 de 17 de septiembre, que rechaza la solicitud de cesación de la detención preventiva, y
que dio lugar a que la imputada a partir del 5 de noviembre de igual año, solicite en forma
consecutiva audiencias de cesación a la detención preventiva, sin que se hubieren fijado o
desarrollado la misma; a demás que la suspensión se debió a razones no atribuibles a su persona; ii)
Corresponde hacer referencia a los Fundamentos Jurídicos de la SC 0384/2011-R de 7 de abril,
relativa a que toda autoridad que conozca de una solicitud de un detenido o privado de libertad,
debe tramitar la causa con la mayor celeridad posible y dentro de los plazos legales si están fijados
y en un plazo razonable, si no está establecido en la ley; iii) La autoridad demandada, vulneró el
derecho a la libertad de la accionante, por no haber resuelto oportunamente la solicitud de cesación
de la medida de última ratio, señalando audiencia para el efecto; iv) Los arts. 125 y 178 de la CPE,
establecen el ámbito de protección de la acción de libertad con sus características de informalismo
e inmediación que tienen por finalidad, dar una efectiva protección al derecho a la libertad y
resguardar el principio de celeridad; y, v) La acción de libertad, tiene por objeto proteger la vida y
la libertad personal, pudiendo ser invocada por la persona que creyere estar ilegal o indebidamente
perseguida, procesada o privada de libertad, para que se restablezcan las formalidades legales o
restituya el derecho a la libertad.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 160


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Realizada la revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. Según imputación formal de 25 de junio de 2010, el Ministerio Público inició proceso penal
contra Nicolasa Benito Cuti, por la presunta comisión del delito de tráfico de sustancias
controladas, solicitando su detención preventiva (fs. 15 a 17). De la revisión del cuaderno de
control jurisdiccional, efectuada por el Juez de garantías, el Juez Primero de Instrucción en lo
Penal, dispuso la detención preventiva de la accionante el 26 de igual mes y año, en el Centro de
Orientación Femenina de Obrajes de la ciudad de La Paz (fs. 37 a 38 vta.).

II.2. En audiencia de acción de libertad, el abogado de la accionante manifestó que debido a la


recusación formulada contra la Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal, la causa radicó en el
Juzgado Cuarto, donde solicitó en distintas oportunidades la cesación de la detención preventiva de
su defendida, sin que se hubieren considerado y resuelto en audiencia pública, sino denegándosele
por simples decretos. Las solicitudes datan de 4, 12, 13 de julio, 3 y 25 de agosto, 7 de septiembre,
5, 15, 25 y 28 de noviembre, 13 y 21 de diciembre de 2011 y de 9, 23 y 24 de enero de 2012, actos
procesales que se suspendieron en algunas ocasiones por falta de notificación al Ministerio Público
(fs. 33 a 36 vta.).

II.3. Por memorial de 24 de enero de 2012, Nicolasa Benito Cuti, solicitó se fije fecha y hora de
audiencia de consideración de cesación a la detención preventiva; empero, por decreto de 26 de
igual mes y año, el Juez demandado, señaló audiencia pública para el 2 de ese mes y año a
horas 10:00, refiriendo que de acuerdo a los datos del proceso se encuentra sujeto al
procedimiento inmediato por flagrancia (fs. 32 y vta.). Sin pronunciarse sobre la solicitud de
cesación a la detención preventiva.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, solicitó en varias oportunidades la cesación de su detención preventiva, sin que la


autoridad encargada del control jurisdiccional, señalara fecha para dicho efecto, contrariamente
condicionó la misma a que previamente se subsanen vicios de nulidad existentes en la causa.
Declarada la nulidad de los defectos procesales, reiteró su petición y contrariamente el Juez fijó
audiencia de “procedimiento inmediato por flagrancia, vulnerando de esta manera sus derechos a la
libertad, a la seguridad jurídica; al debido proceso, a la defensa y una justicia plural, pronta,
oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones “y al principio de celeridad”. Por consiguiente,
corresponde analizar, en revisión si tales extremos son evidentes a efectos de conceder o no la
tutela reconocida por la acción de libertad.

III.1. Alcance y finalidad de la acción de libertad

El art. 125 de la CPE, en forma precisa establece el alcance de este medio de defensa, al resguardar
los derechos a la vida, la libertad y locomoción, como bienes jurídicos de carácter primario de los
cuales deriva el ejercicio de otros derechos fundamentales, de ahí la celeridad e inmediatez que
debe imprimirse en su tratamiento o tramitación.

Así instituido el alcance de esta garantía jurisdiccional, su finalidad como acción oportuna y eficaz
es guardar la tutela a la vida, cuando a consecuencia de la restricción al derecho a la libertad sea
puesta en peligro; el cese de la persecución indebida, cuando la acción de un funcionario público,
autoridad jurisdiccional o judicial y el particular que busca, persigue y hostiga una persona, sin que
exista motivo legal alguno ni orden expresa de captura, emitida por autoridad competente; el cese
del procesamiento indebido; y el restablecimiento de las formalidades legales y la restitución del
derecho a la libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 161


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2. El informalismo en la interposición de la acción de libertad

La presente garantía jurisdiccional como medio de defensa idóneo frente a los actos ilegales u
omisiones indebidas de personas particulares o autoridades públicas, mantiene sus características
que la distinguen de otras acciones tutelares, así como el informalismo, por la ausencia de
requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por la urgencia en la protección de los
derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite caracterizado por su celeridad; la generalidad
ya que no reconoce ningún tipo de privilegio, inmunidad o prerrogativa y la inmediación, porque
se requiere que la autoridad judicial tenga contacto con la persona privada de libertad. En ese
sentido y ante el nuevo modelo constitucional implantado en nuestro país a partir de la entrada en
vigencia de la norma fundamental promulgada el 7 de febrero de 2009, la SC 0044/2010-R de 20
de abril, resaltó los cambios introducidos al afirmar: “1. El informalismo, pues actualmente se
amplía la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, que antes estaba reservada
sólo a los supuestos en que la persona fuera menor de edad o incapacitada, analfabeta o
notoriamente pobre y; 2. La inmediación, ya que; la CPE señala que la autoridad judicial, una
vez presentada la acción, debe disponer que el accionante sea conducido a su presencia o acudir
al lugar de la detención, última posibilidad que no estaba contemplada en la Constitución
abrogada y que es fundamental para comprobar las condiciones en que la persona se encuentra
privada de libertad, especialmente cuando existe denuncia de torturas, tratos crueles, inhumanos o
degradantes, o si se ha vulnerado el derecho a la integridad física o existe amenaza a su vida.

Otra de las modificaciones introducidas en la Constitución, es la relativa a la competencia del juez


o tribunal que conoce la acción, toda vez que actualmente la acción de libertad debe presentarse
ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, lo que sin duda es saludable dada la
especialización de los jueces en esta materia de la cual emergen la mayoría de las acciones de
libertad.

Sin embargo, las modificaciones más importantes, están referidas al ámbito de protección de la
acción de libertad, que alcanza ahora al derecho a la vida y a la posibilidad de presentar la
acción de libertad también contra particulares, conforme se desprende del art. 126 de la CPE” (lo
resaltado nos pertenece).

De donde se extrae que la prescindencia de formalidades procesales en la presentación de la acción


de libertad, responde a la naturaleza de los derechos que tutela; en ese sentido, en el ámbito
procesal constitucional, durante la tramitación de la acción debe resguardarse el respeto al debido
proceso por parte del órgano jurisdiccional que se constituya en juez o tribunal de garantías, es así
que la SC 0128/2011-R de 21 de febrero, estableció: “…la acción de libertad, también puede ser
presentada oralmente; empero, ello no significa que no se deba tener un registro de dicha
actuación oral, pues si bien prima la oralidad por encina de la escritura, se debe tener en cuenta
la necesidad procesal de registrar el acto ilegal denunciado; es decir, qué y a quién o a qué
autoridades -así no se conozca el nombre- pero se identifique el o los hechos y las circunstancias
del acto acusado de ilegal, por el que se solicita la tutela a sus derechos. En síntesis si se registra
la denuncia o demanda oral, esta actuación servirá de instrumento procesal para: 1) El
accionante, a objeto de que sea escuchado debidamente en lo que pretende hacer valer dentro de
la acción tutelar; 2) El accionado o demandado, a objeto de que preste su informe y asuma
defensa, dado que la otorgación de tutela genera responsabilidad civil y penal, inclusive; y, 3)
Para el juez o tribunal de garantías, a objeto de que falle con certeza y objetividad, pues en base
al registro de la denuncia efectuada en la acción de libertad, que bien puede o no, ser ampliada
en audiencia, analizará el fondo de la problemática constitucional a dilucidar, como también
verificará si amerita o no exigir cierta presentación de prueba a personas o instituciones que
tengan la información pertinente y que le dé mayores luces en un plano de objetividad y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 162


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

celeridad, pero sobre todo de justicia; pues debe tenerse en cuenta que el art. 115.II de la CPE,
establece que. El Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia
plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones, debido proceso que también es
aplicable al ámbito procesal constitucional

En consecuencia, tratándose de la presentación oral de la acción de libertad, el procedimiento a


seguir es el siguiente:

El secretario o actuario del juzgado o tribunal donde se sorteó la acción de libertad, deberá
sentar en acta la demanda verbal de la acción de libertad, haciendo una relación del lugar,
hechos, fechas, nombres, cargos, derechos lesionados, petitorio y demás datos que pudiere dar
y/o identificar en ese momento. No obstante, en caso de que el accionante no proporcione los
datos necesarios, debe labrarse el acta con los datos que se tengan, así sean mínimos.

A cuyo efecto anualmente, se abrirá un Libro de presentación oral de Acción de Libertad, y que en
cada acta constará el lugar, fecha y hora, como también el nombre y la firma del presentante, si lo
hace por sí, o por otro con o sin mandato.

Asimismo, a momento de la citación a la persona, autoridad o funcionario demandado, se le


entregará una copia del acta; o, en su defecto se le hará constar que la acción tutelar fue
presentada en forma oral, cuyo registro cursa en el respectivo Libro del juzgado o tribunal de
garantías.

Se deja expresa constancia, que el presente procedimiento, no tiene por finalidad entorpecer el
trámite o dilatar el mismo, al contrario, responde a la necesidad procesal de regular aspectos que
conlleven a una mejor compresión y solución de la problemática planteada que debe ser resuelta
en el sentido constitucional, dado que al ser la acción de libertad un medio de defensa de derechos
fundamentales, el juzgador constitucional debe materializar la acción de la justicia pero sin
vulnerar a su vez -en ese cometido- otros derechos también fundamentales” (lo resaltado nos
corresponde).

Razonamiento complementado con la precisión efectuada por la SC 0023/2012 de 16 de marzo,


que refirió:

a) En provincias y en general en lugares en los cuales exista un sólo juzgado o tribunal


competente penal, la interposición verbal de una acción de libertad, deberá efectuarse
directamente ante el mismo debiendo el secretario inmediatamente, en el marco del principio de
informalismo y en la medida de lo posible, efectuar el registro en un acta de los datos esenciales y
en su caso generales de ley de la parte accionante y de la parte accionada además de los hechos
relevantes a la acción de libertad a efectos de efectuar la correspondiente notificación a la parte
demandada con dicha acta.

b) En capitales de departamento o en centros judiciales que cuenten con mecanismos de sorteo


digital o de otro tipo, la interposición verbal de la acción de libertad deberá efectuarse por
ventanilla, oficina o su equivalente debiéndose de forma inmediata registrar dicha acción de
libertad, los datos o generales de ley de la parte accionante y de ser posible de la parte
demandada, además del nombre de la persona que presente con o sin representación la acción de
libertad a efectos de la responsabilidad y una vez sorteado o definido el juzgado o tribunal penal
competente la parte accionante o su representante con o sin mandato, deberá dirigirse a
secretaría del juzgado o tribunal penal competente a efectos del registro correspondiente para que
en el marco del principio de informalismo y en la medida de lo posible, efectúe el registro en un

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 163


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

acta de los datos esenciales y en su caso generales de ley de la parte accionante y de la parte
accionada además de los hechos relevantes a la acción de libertad a efectos de efectuar la
correspondiente notificación a la parte accionada con dicha acta.

c) La presentación de la acción de libertad verbal o escrita puede presentarse por el directamente


afectado en sus derechos o por un tercero con o sin representación, aclarándose que en todo caso
cuando una persona privada de su libertad manifieste su voluntad de plantear una acción de
libertad y que no cuente con una tercera persona para que interponga ésta a su nombre, la
autoridad a cargo de su custodia deberá de inmediato labrar un acta y presentar la misma a la
autoridad penal competente para el conocimiento de la de libertad.

d) A efecto de la elaboración del acta, la diferencia entre una acción de libertad verbal y otra
escrita radica en la posibilidad de identificar claramente la relación circunstanciada del o de los
hechos denunciados resultando indiferente otras formalidades así por ejemplo un documento,
carta o papel que identifique con claridad a la parte actora y a la parte accionada pero no los
hechos circunstanciados que den lugar a la acción de libertad, continuará considerándose una
acción de libertad verbal; por tanto, deberá elaborarse el acta.

e) Ante la interposición de una acción de libertad verbal conforme el procedimiento referido más
adelante, el secretario del juzgado o tribunal penal competente deberá levantar un acta en el Libro
de presentación oral de Acción de Libertad en la cual consigne los datos o en su caso generales de
ley de la parte actora, en la medida de lo posible los datos o en su caso generales de ley de la
parte accionada y la relación circunstanciada de los hechos que no sólo busca facilitar la labor
del juez o tribunal sino preservar el derecho a la defensa de la parte accionada fundamentalmente
en casos de notoria complejidad por la cantidad de detenidos, de temas en debate, etc. En todo
caso, de no ser posible dejar constancia de los referidos datos y de los hechos circunstanciados, en
el acta levantada en el Libro de presentación oral de Acción de Libertad deberá dejarse
constancia de la imposibilidad que impide dicho registro.

f) En todo caso la inobservancia a las reglas establecidas en la presente Sentencia determinará


que el Tribunal Constitucional Plurinacional corrija el procedimiento, salvo que no se hubiere
provocado la indefensión a la parte demandada o cuando este Tribunal, en el marco del
informalismo que rige a la acción de libertad, encuentre que de todas formas procederá la
denegación de la tutela, independientemente de la responsabilidad funcionaria que pueda generar
la inobservancia del entendimiento asumido.

En el presente caso ante la interposición verbal de la acción de libertad por parte del accionante,
se procedió a registrar únicamente la identidad de la parte actora, la parte demandada y en
derechos vulnerados “detención indebida - libre locomoción - libertad” con lo que se procedió a
notificar a la parte accionada sin efectuarse mayor precisión de los hechos que dieron lugar a
dicho planteamiento, cuando conforme a lo referido anteriormente, en lo posible y de poder
efectuarse, es menester dicha precisión, pese a ello en el caso concreto la autoridad demanda en
audiencia procedió a ejercer defensa sin afectarse por ello el debido proceso que rige a los
procedimientos constitucionales por lo que atendiendo a las características del caso, no
corresponde corregir procedimiento”.

III.3. El principio de celeridad en las solicitudes de cesación a la detención preventiva

La Constitución Política del Estado, prescribe que toda persona tiene derecho a la libertad personal
que sólo podrá ser restringido en los límites señalados por la ley, para asegurar el descubrimiento
de la verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales; así también, dispone que

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 164


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

nadie será detenido, aprehendido o privado de su libertad, salvo en los casos y según las formas
establecidas por la ley (art. 23.I y III). De donde se desprende que siendo la libertad un derecho
fundamental de carácter primario, su protección se tutela a través de la presente garantía
jurisdiccional, como medio idóneo de carácter sumario, extraordinario e inmediato.

El art. 178.I de la Ley Fundamental, establece como uno de los principios que rigen la
administración de justicia a la celeridad, como componente del debido proceso, entendido como la
prontitud debida en los actos procesales a objeto de brindar la tutela jurisdiccional efectiva y
acceso a la justicia (art. 115 de la CPE) y no colocar a las partes en incertidumbre jurídica durante
el desarrollo del proceso. Cuando la celeridad esté vinculada con el derecho a la libertad, el órgano
jurisdiccional tiene la obligación de tramitar la solicitud sin dilaciones indebidas, aún cuando no
hubiere un término establecido por la ley; al respecto, la SC 0900/2010-R de 10 de agosto,
recogiendo el razonamiento de la SC 0224/2004-R de 16 de febrero, indicó: “…toda autoridad
que conozca de una solicitud en la que se encuentre involucrado el derecho a la libertad física,
tiene el deber de tramitarla con la mayor celeridad posible, o cuando menos dentro de los plazos
razonables, pues de no hacerlo podría provocar una restricción indebida del citado derecho, lo
que no significa, que siempre tendrá que otorgar o dar curso a la solicitud en forma positiva, pues
esto dependerá de las circunstancias y las pruebas que se aporten en cada caso, dado que se
reitera la lesión del derecho a la libertad física, está en la demora o dilación indebida de una
solicitud de tal naturaleza, vale decir, que si la solicitud es negada de acuerdo a una compulsa
conforme a Ley no es ilegal siempre que esa negativa se la resuelva con la celeridad que exige la
solicitud” (las negrillas nos pertenecen).

En ese contexto, en los casos específicos de solicitudes de cesación a la detención preventiva, los
pronunciamientos de la jurisprudencia constitucional han sido uniformes al establecer que el juez a
cargo del control jurisdiccional deberá imprimir la mayor celeridad en su tramitación, por la
naturaleza del derecho que se encuentra de por medio, debiendo en consecuencia, en un plazo
razonable fijar audiencia pública para su consideración y resolución, que no implica declarar la
procedencia de la misma, sino la ponderación de los elementos que desvirtúen los motivos que la
fundaron.

Con relación a la tramitación de las solicitudes de cesación a la detención preventiva, la SC


0078/2010-R de 3 de mayo, afirmó: “…es preciso puntualizar que la detención preventiva, no
tiene por finalidad la condena prematura, por cuanto la presunción de inocencia, sólo es
desvirtuada ante un fallo condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su imposición
como medida precautoria está sujeta a reglas, como también su cesación, lo cual implica el
trámite a seguir; y si bien no existe una norma procesal legal que expresamente disponga un
plazo máximo en el cual debe realizarse la audiencia de consideración, corresponde aplicar
los valores y principios constitucionales, previstos en el ya citado art. 8.II de la CPE, referido
al valor libertad complementado por el art. 180.I de la misma norma constitucional, que
establece que la jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad
entre otros; motivo por el cual toda autoridad jurisdiccional que conozca una solicitud de un
detenido o privado de libertad, debe tramitar la misma, con la mayor celeridad posible, y
dentro de los plazos legales si están fijados, y en un plazo razonable, si no está establecido por
ley. De no ser así, tal actuación procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del
detenido y en consecuencia repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por
la sola privación de libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que
necesariamente se deba deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado
oportunamente a fin de que obtenga una respuesta positiva o negativa” (las negrillas son
añadidas).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 165


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Bajo ese razonamiento, la citada Sentencia Constitucional, estableció: “En consecuencia, se


considera acto dilatorio en el trámite de la cesación de la detención preventiva, cuando:

a) En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, se


dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por ley.

b) Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o prudencial. Plazo que
puede ser en un límite de tres o cinco días máximo, dependiendo de la particularidad de cada
caso, cuando por ejemplo existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan que
ser notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado acto previo y
esencial -como sucede con algunas notificaciones-, o que el juzgado esté de turno, etc. Con la
excepción única y exclusiva en los casos que exista complejidad por la naturaleza propia y la
relevancia del proceso, como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a la
petición; situación que deberá ser justificada por la autoridad judicial competente a momento
de señalar la fecha de audiencia, teniendo en cuenta la razonabilidad.

c) Se suspende la audiencia de consideración, por causas o motivos que no justifican la


suspensión, ni son causales de nulidad. Tal el caso de la inasistencia del representante del
Ministerio Público o de la víctima y/o querellante, si es que han sido notificadas legalmente y
no comparecen a la audiencia. En el caso del Ministerio Público al estar regido por el principio
de unidad tiene los medios para asistir a través de otro fiscal, y en cuanto al querellante al ser
coadyuvante y estar notificado, su participación es potestativa en dicho acto, y por ende, su
inasistencia no vincula a la autoridad jurisdiccional al estar cumplida la formalidad. No
obstante, en caso de que la suspensión se deba a la falta de notificación o a la inasistencia del
propio imputado, no existe dilación indebida ni afectación a derecho alguno, en cuyo caso
deberá fijarse nueva fecha de audiencia conforme a las directrices expuestas” (las negrillas nos
corresponde).

III.4. Análisis del caso concreto

En la problemática planteada, se advierte que ante las constantes solicitudes de cesación a la


detención preventiva formuladas por Nicolasa Benito Cuti, el Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal de El Alto, no fijó audiencia para su consideración y consiguiente resolución, lo que
generó que desde julio de 2011 hasta la presente fecha -Conclusión II.2 de este fallo-,
permaneciera en incertidumbre respecto de su situación procesal; tiempo en el cual bajo la
excusa de haberse observado vicios procesales, a ser subsanados previamente, dilató
indebidamente la solicitud de la accionante situación que constituyo vulneración de la garantía al
debido proceso y el derecho de acceso a una justicia pronta, oportuna y sin dilaciones conforme
establece el art. 115 de la CPE.

Resulta, pertinente recordar que de acuerdo a la jurisprudencia constitucional, citada en el


Fundamento Jurídico III.3 de la presente Resolución, importa acto dilatorio en el trámite de
cesación a la detención preventiva, cuando el órgano jurisdiccional, en lugar de fijar
directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, disponga traslados
innecesarios no previstos por la ley. En el caso concreto, tratándose de una solicitud vinculada
directamente con el derecho a la libertad, por la naturaleza del mismo, la autoridad demandada,
debió señalar fecha y hora para dicho acto procesal, independientemente de la existencia de
presuntos vicios procesales, que en el transcurso del proceso pueden ser reparados a través de
los mecanismos legales que la norma adjetiva penal prevé. En ese sentido, conviene reiterar, que
las solicitudes de cesación a la detención preventiva deben ser consideradas y resueltas en
audiencia pública, donde el órgano jurisdiccional compulse o pondere los elementos que el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 166


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

imputado y/o acusado presente para desvirtuar los motivos o peligros procesales que fundaron la
imposición de la medida de última ratio, según prevé el art. 239 del CPP, para finalmente
resolver sobre la procedencia o no de la misma.

Respecto al término en el cual debe fijarse audiencia para la consideración de las solicitudes
vinculadas con la libertad, en el caso en examen para la cesación a la detención preventiva, de la
revisión de los antecedentes y lo informado por el abogado de la accionante, se advierte que el
Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, no imprimió la debida celeridad en su tramitación, dado
que, entre la fecha de formulada la petición y la señalada para su consideración se observa un
intervalo de más de cinco días, constituyendo ello un acto dilatorio por demás evidente. Si bien
es cierto, que el Código de Procedimiento Penal, no establece el plazo en el cual deban
tramitarse las solicitudes de cesación a la detención preventiva, ello no implica, que su
consideración y resolución se realice en lapsos de tiempo demasiado extensos; excepto, claro
está cuando exista complejidad por la naturaleza propia y la relevancia del proceso, como los
derechos e intereses comprometidos y relacionados a la petición; situación que deberá
justificarse por el órgano jurisdiccional competente a momento de señalar la fecha de audiencia,
teniendo en cuenta la razonabilidad -SC 0078/2010-R, segundo supuesto-, lo que no sucede en el
caso concreto, en el entendido que se trata de un proceso penal seguido por el Ministerio Público
contra Nicolasa Benito Cuti, por la presunta comisión del delito de tráfico de sustancias
controladas, por el cual se encuentra detenida desde el 26 de junio de 2010, no advirtiéndose
complejidad alguna, además de no haberse explicado dicho extremo por el Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal.

Finalmente, cabe hacer referencia a la injustificada suspensión de las audiencias en que incurrió
el Juez demandado, que conforme al tercer supuesto desarrollado en la SC 0078/2010-R,
constituye un acto dilatorio que lesionó los derechos fundamentales de la accionante, teniendo
presente que se encuentra limitada en el ejercicio de su derecho a la libertad. En ese sentido, el
órgano jurisdiccional debe procurar que las notificaciones a las partes del proceso, se realicen
con la debida antelación y diligencia debida a los efectos que el acto procesal no se suspenda
bajo dicho argumento, más aún cuando de por medio se encuentre el citado bien jurídico, como
en el caso presente; consecuentemente, efectuada la diligencia de comunicación y ante la
inconcurrencia de las partes, la audiencia de consideración de cesación a la detención preventiva
no puede suspenderse bajo ningún fundamento, según precisó la jurisprudencia desarrollada en
el presente fallo.

En consecuencia, el Juez de garantías, al haber concedido la tutela solicitada, sin disponer la


libertad de la accionante, obró correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada, en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y
el art. 12.7 Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve:

1º CONCEDER la tutela solicitada, 2º Se dispone que por Secretaría General se remita


antecedentes al Consejo de la Magistratura a los efectos que esa instancia considere si corresponde
el inicio del proceso disciplinario contra Rafael Alcón Aliaga, Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal de El Alto; y al Ministerio Público por incumplimiento de deberes.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 167


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Fdo Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.- Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0025/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00069-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 070/2012 de 4 de febrero, cursante de fs. 27 a 28 pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Yola Mamani de Laruta contra Claudio Tórrez
Fernández y Elena Julia Gemio Limachi en suplencia legal, Jueces Técnicos del Tribunal
Séptimo de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 2 de febrero de 2012, cursante de fs. 4 a 5, la accionante refiere que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Había intentado plantear la presente acción en forma oral, sin embargo en el Juzgado no se quiso
elaborar el acta correspondiente, viéndose obligada a tener que presentarla por escrito. Agrega
que dentro del proceso penal que se sigue en su contra, formuló en la misma audiencia apelación
contra la medida cautelar que se le impuso, en presencia de todas las partes, quienes fueron
notificadas en dicho acto procesal, por ende en aplicación del art. 251 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), solicitó se remitan obrados al superior en grado dentro del plazo de
veinticuatro horas; sin embargo, hasta la presentación de la presente acción de defensa no fue
remitida su apelación, encontrándose detenida preventivamente sólo por cuestiones burocráticas,
con el serio peligro que esa demora pueda significar en su salud, al encontrarse con riesgo de
ingresar en coma diabético que puede ocasionarle la muerte.

La dilación y retardación de justicia señalada, se subsume en lo establecido por los arts. 130 y
135 del CPP, puesto que su situación continúa incierta, lo cual es un presupuesto para la
procedencia de la acción de libertad, conforme estableció la jurisprudencia constitucional que en
casos similares concedió tutela.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

La accionante considera lesionados los derechos a la vida, a la dignidad, a la libertad y de las


garantías al debido proceso, celeridad y certidumbre jurídica, citando al efecto los arts. 15, 22,
115, 116, 179 y 180 de la Constitución Política del Estado (CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 168


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio
Solicita se conceda la acción de libertad y se disponga la remisión inmediata de la apelación de
medida cautelar que formuló, con reparación de daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 4 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 26
y vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

La accionante a través de su abogado defensor ratificó y reiteró los extremos del memorial de la
acción de libertad, agregando que: a) El Tribunal Séptimo de Sentencia emitió una Resolución
negando la cesación de su detención preventiva, a pesar de haber acreditado mediante prueba
abundante su delicado estado de salud, el cual en ningún momento fue considerado por los
Jueces demandados, con el argumento de no ser un aspecto que sea determinante para establecer
la cesación; b) Contra dicha Resolución, en audiencia y presencia de todas las partes presentó
recurso de apelación oralmente, solicitando se remita la misma dentro de las veinticuatro horas;
sin embargo, la misma no fue enviada con el argumento de estar elaborándose el acta, además de
estar actuando en suplencia legal; y, c) No es evidente que la demora en la remisión del recurso
le sea atribuible, pues son dos días sin que se cumpla con ese actuado procesal.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los Jueces demandados, por informe escrito cursante a fs. 22, señalaron que: 1) Les
correspondió resolver la solicitud de cesación a la detención preventiva planteada por la
accionante, consiguientemente después de la compulsa y valoración de antecedentes y elementos
de prueba, en base a los cuales dictaron la Resolución 03/2012, rechazándola; 2) La accionante
interpuso recuso de apelación contra la indicada Resolución, remitiéndose la misma a la oficina
de Demandas Nuevas Penales para el sorteo correspondiente y consiguiente remisión a la Sala
Penal de Turno, por lo que no corresponde que la accionante recurra a la acción de libertad en
forma paralela a los medios ordinarios con los que cuenta para lograr su objetivo; y, 3) La
demora es atribuible a la propia accionante porque recién se apersonó ante la Secretaría del
Juzgado para proveer las fotocopias señaladas en audiencia.

I.2.3. Resolución

La Jueza Cuarta de Instrucción en lo Penal, constituida en Jueza de garantías, mediante


Resolución 070/2012 de 4 de febrero, cursante de fs. 27 a 28, concedió la tutela solicitada y
dispuso que el 6 de febrero de 2011 sea remitido el cuadernillo de apelación a la Sala que
corresponda, bajo responsabilidad funcionaria del Tribunal Séptimo de Sentencia, debiendo
comunicarse al Consejo de la Magistratura, respecto al incumplimiento de labores del Secretario
de ese Juzgado en la elaboración de actas. El fallo se fundó en los siguientes puntos: i) Con
relación a la interposición de la acción de libertad en forma oral, está prevista en el art. 125 de la
CPE, por lo que correspondía al Secretario levantar el acta de la demanda oral y no así a los
operadores de justicia; y, ii) El art. 251 del CPP, establece que la resolución que disponga,
modifique o rechace las medidas cautelares, será apelable en el efecto no suspensivo, lo que
quiere decir que puede ser elevada con las piezas originales y no se necesita ninguna fotocopia
para su remisión, debiendo haberse enviado al Tribunal de alzada dentro de las veinticuatro
horas, más si los sujetos procesales estuvieron presentes en la audiencia, pues no se cumplió
dicho plazo; dilación injustificada que pone en riesgo la vida de la accionante.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 169


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

Según informe presentado por las autoridades demandadas, por Auto 03/2012, rechazaron la
solicitud de cesación de detención preventiva interpuesta por la accionante, motivando la
presentación del recurso de apelación; el mismo que fue remitido a la oficina de Demandas
Nuevas Penales para el sorteo correspondiente y la demora no es atribuible al Tribunal, sino a la
propia accionante, puesto que recién se apersonó a Secretaría para sacar las fotocopias
solicitadas en la audiencia pública (fs. 22).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, manifestando haber intentado plantear en forma oral la presente acción de


libertad sin lograr su cometido, denuncia la vulneración de sus derechos a la vida, a la dignidad
y a la libertad, así como de las garantías del debido proceso, celeridad y certidumbre jurídica,
por cuanto las autoridades demandadas sin considerar que su vida se encuentra en riesgo por su
deteriorada salud, no remitieron en el plazo de ley ante el Tribunal de alzada, el recurso de
apelación que formuló contra la Resolución de rechazo a su solicitud de cesación de detención
preventiva. Corresponde en consecuencia, analizar la problemática planteada para establecer si
se debe conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Alcance y reglas que deben observarse en la tramitación de acción de libertad


planteada en forma oral

El art. 125 de la CPE, establece que: “Toda persona que considere que su vida está en peligro,
que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a
su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya el derecho a la libertad”.

En el mismo sentido el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP),


dispone que la acción de libertad: “Es una acción constitucional extraordinaria de tramitación
sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de los derechos a la vida, a la
libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión”.

Conforme a las normas citadas, la tramitación sumaria constituye una de las principales
características de la acción de libertad, por cuyo motivo, el constituyente ha previsto que ésta
puede ser interpuesta inclusive de forma verbal y si bien el procedimiento al que debe sujetarse
la tramitación de la acción de libertad y que está contenida en los arts. 125 al 127 de la CPE y 65
al 72 de la LTCP, estas no han precisado cómo ha de efectivizarse la presentación de la acción
de libertad en forma oral; al efecto, resulta necesario establecer la forma en que se procederá en
ese caso, es así que cuando el accionante opte por la modalidad de presentación oral de la
acción, deberá acudir ante el juez o tribunal competente, donde el Secretario del juzgado o
tribunal de garantías de inmediato deberá levantar un acta circunstanciada de los hechos
denunciados, identificando a los demandados, de ser posible, haciendo constar su nombre
y domicilio a efectos de su citación, especificando los derechos lesionados. Labrada el acta,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 170


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

será firmada por el accionante en señal de conformidad con el contenido conjuntamente


con el nombrado funcionario judicial; quien de inmediato pasará la referida acta a
conocimiento del juez o tribunal a efectos de que la autoridad de garantías imprima el
trámite correspondiente a una acción de libertad planteada por escrito.

III.2. Trámite del recurso de apelación incidental en medidas cautelares

El art. 251 del CPP, en cuanto a la apelación contra la resolución que resuelva la imposición,
modificación o rechazo de las medidas cautelares, establece:
“La resolución que disponga, modifique o rechace las medidas cautelares, será apelable, en el
efecto no suspensivo, en el término de setenta y dos horas.

Interpuesto el recurso, las actuaciones pertinentes serán remitidas ante la Corte Superior de
Justicia, en el término de veinticuatro horas.

El Tribunal de apelación resolverá, sin más trámite y en audiencia, dentro de los tres días
siguientes de recibidas las actuaciones, sin recurso ulterior”.

De acuerdo con la norma transcrita, el trámite del recurso de apelación contra las resoluciones
que dispongan, modifiquen o rechacen las medidas cautelares, es de naturaleza sumaria, pues
una vez interpuesto este recurso, las actuaciones pertinentes deben ser remitidas ante la Corte
Superior de Justicia en el término de veinticuatro horas, a efectos de que el tribunal de alzada,
sin más trámite, resuelva la apelación en audiencia dentro de los tres días siguientes de recibidas
las actuaciones; es decir, que el mencionado recurso de apelación, por su configuración procesal,
constituye un medio idóneo, eficaz e inmediato de defensa con el que cuentan las partes para
reclamar supuestas lesiones a sus derechos, posibilitando que el tribunal de alzada corrija los
errores del inferior denunciados en el recurso. El referido recurso de apelación, resulta idóneo
porque está expresamente establecido en el Código de Procedimiento Penal para impugnar las
medidas cautelares que vulneren el derecho a la libertad del imputado, como emergencia de la
aplicación de las medidas cautelares; e inmediato, porque debe ser resuelto sin demora, en un
plazo de sólo tres días.

Como el recurso de apelación es un recurso idóneo e inmediato de defensa contra supuestas


lesiones y restricciones del derecho a la libertad de los imputados, en el que el tribunal de alzada
podrá corregir los errores en que hubiese podido incurrir el inferior, por la inmediatez que le
caracteriza a ese medio impugnativo, el trámite establecido por el citado art. 251 del CPP es
sumario, pues impone la remisión de la apelación planteada dentro de las veinticuatro horas de
presentada y por ende el bien jurídico que protege, como es el de la libertad, no puede estar
sujeto a dilaciones indebidas que tendieren a demorar la pronta definición de la situación
jurídica del imputado, debiendo en consecuencia, tramitarse respetando los plazos breves
establecidos por la norma adjetiva penal señalada, no obrar así, importa una dilación indebida
que vulnera el derecho a la libertad y que eventualmente puede vulnerar el derecho a la vida
cuando de por medio se encuentran problemas de salud que requieren una pronta definición de la
situación legal del imputado, cuya variación depende de la ponderación que efectúe el tribunal
de apelación con relación a los fundamentos de la medida cautelar, para disponer su revocatoria
o confirmación.

III.3. En cuanto a la omisión de recepción de la acción de libertad en forma oral

En el caso que se examina, la accionante en primer término denuncia haber intentado presentar
su acción de libertad en forma oral, sin lograr ese propósito. Al respecto, conforme se tiene

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 171


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecido en el Fundamento Jurídico III.1, el Secretario del Juzgado de garantías, tomando en


cuenta la celeridad que caracteriza a la acción de libertad, inmediatamente de haberse planteado
ésta en forma oral, debió redactar el acta respectiva, con una relación circunstanciada de los
hechos denunciados que la motivan, precisando los derechos que el accionante consideraba
lesionados como son el derecho a la vida y a la libertad, consignando el nombre y domicilio de
las autoridades demandadas, firmando dicho documento, el accionante y el nombrado
funcionario, para luego poner de inmediato en conocimiento de la Jueza de garantías a efectos
de que dicha autoridad, imprima el trámite correspondiente establecido en el art. 61 de la LTCP.

III.4. Respecto a la denuncia de incumplimiento de remisión de apelación

Con relación a la denuncia formulada por la accionante sobre la demora en la remisión de su


apelación contra el Auto que rechazó la modificación de las medidas cautelares, del informe
prestado por las autoridades demandadas, se tiene que la apelación formulada por la accionante
fue remitida a la oficina de Demandas Nuevas Penales para su sorteo y consiguiente remisión a
la Sala Penal de turno; en consecuencia no corresponde que la accionante recurra a la acción de
libertad.

Por otra parte, cabe aclarar que no es correcto que la accionante pretenda que las autoridades
demandadas le concedan su libertad por causas atribuibles a su salud, al no estar prevista esta
causal para la cesación de la detención preventiva, por lo que debió haber planteado, en caso de
ser evidente su delicado estado de salud, su internación en un centro hospitalario, conforme a las
previsiones contenidas en los arts. 35 de la CPE, 238 del CPP y 94 y ss. de la Ley de Ejecución
Penal y Supervisión (LEPS).

Por lo precedentemente señalado, la Jueza de garantías al haber concedido la acción de libertad,


no ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales ni aplicado debidamente
los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la
Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: DENEGAR la
tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 172


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0026/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra. Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00056-2012-01-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 01/12 de 13 de enero de 2012, cursante de fs. 41 a 42 vta. pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Juan Carlos Paredes Montenegro contra Ponciano
Ruiz Quispe, Vocal de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia
de Pando y Ángel Heredia Montaño, Conjuez del referido Tribunal.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de enero de 2012, cursante de fs. 30 a 32, el accionante expresa
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Habiendo sido imputado junto con Juan Gabriel Manuyama Gonzales, el 12 de agosto del 2011,
por el delito de robo agravado y detenidos preventivamente por concurrir los peligros procesales
establecidos en el art. 234. numerales 1, 2 y 6 y art. 235.1 y 2 del Código de Procedimiento
Penal (CPP).

El 26 de septiembre de 2011, el coimputado Juan Gabriel Manuyama Gonzales, solicitó su


cesación a la detención preventiva, misma que en primera instancia fue rechazada por el Juez
Segundo de Instrucción en lo Penal, empero, concedida posteriormente por Auto de Vista de 26
de octubre del referido año.

Asimismo, el accionante el 8 de diciembre de 2011, impetró la cesación a su detención


preventiva, la misma que fue rechazada por Auto Interlocutorio de 15 de ese mismo mes y año,
pronunciada por el Juez Primero de Instrucción en lo Penal con el argumento de que concurría
aún el riesgo de fuga conforme el art. 234.6 del CPP y riesgo de obstaculización conforme el art.
235.1 del mismo Código; siendo este rechazo ratificado por las autoridades ahora demandadas a
través Auto de Vista de 29 de diciembre del 2011.

Señala que, habiendo la imputación, los memoriales de cesación y apelación tenido el mismo
tenor, por qué para el coimputado Juan Gabriel Manuyama se dispuso su libertad y para él no;
agrega recalcando que en el presente proceso no existe antecedente, ni prueba documental que
acredite que exista imputación o condena en su contra, que este extremo no se menciona en la
imputación, ni en el fundamento del Auto Interlocutorio 149/2011, por el cual se dispuso su
detención.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 173


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Concluye mencionando que la obligación de la carga de la prueba recae en el Ministerio


Público, quien debería probar la concurrencia de ese extremo.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de los derechos consagrados en los arts. 115 y 116 de la Constitución
Política del Estado (CPE), sin especificar de manera clara el derecho vulnerado.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela y se disponga la anulación del “Auto de vista de 29 de diciembre de


2011 y se aplique medidas sustitutivas a la detención preventiva conforme al Art. 240 del
CPP…”. Con costas, daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 13 de enero del 2012, según consta en el acta cursante de fs.
39 a 40 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado accionante ratificó los términos expuestos en la demanda de acción de libertad


interpuesta.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El Presidente de la Sala Penal y Administrativa, Ponciano Ruiz Quispe, ahora demandado,


brindó informe oral en audiencia, puntualizando: a) El Tribunal que conoció la apelación,
fundamentó su decisión conforme al art. 398 del CPP, por cuanto, la Resolución apelada estaba
basada en la concurrencia de los peligros señalados por el art. 234.6 y 235.1 del citado Código, y
en la última audiencia de cesación a la detención preventiva no se cumplió con lo establecido
por el art. 239 del CPP, al no existir nuevos elementos para disponer la cesación a la detención
preventiva; y que el trato desigual cuestionado, se debe a que las circunstancias son diferentes
para ambos imputados; y b) Asimismo, señaló:“…trata de sorprender en la audiencia de
cesación, presentaron documentos y en la segunda cesación acompañan los mismos documentos,
es decir; que no varió nada...el detenido tiene la obligación de desvirtuar los peligros
procesales…”.

El codemandado, Ángel Heredia Montaño, refirió: 1)”…Fui designado como conjuez, en la


audiencia de Cesación a la Detención Preventiva, el tribunal escuchó la aseveración del ahora
accionante y nos avocamos a corregir los errores del inferior; 2) Respecto del otro coimputado,
éste fue beneficiado con cesación a la detención preventiva por otro Tribunal; y, 3) Se pidió al
accionante que presentara documentos que diga que ambos tenían el mismo accionar; en su
momento no fueron desvirtuados en su plenitud toda vez que es el imputado, quien debe
desvirtuar los peligros procesales; por otra parte no se habló en ningún momento de la
concurrencia del núm. 2 sólo del numeral 1 del art. 235 del CPP y el art. 234.6 del mismo
Código, los que no fueron desvirtuados”.

I.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 174


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Pando, pronunció la


Resolución 01/12 de 13 de enero del 2012, cursante de fs. 41 a 42 vta., concediendo la acción
de libertad formulada por Juan Carlos Paredes Montenegro contra Ponciano Ruiz Quispe y
Ángel Heredia Montaño, Vocal de Sala Penal y Conjuez, respectivamente, ordenando al
Tribunal que conoció la apelación incidental del rechazo de cesación a la detención preventiva,
así también señalar nueva fecha y hora para conocer y resolver la apelación incidental, con los
siguientes argumentos: i) Se acredita, que no cursa en obrados certificación alguna que
demuestre que el accionante tenga en su contra otra imputación formal por otro hecho delictivo
doloso o haber recibido condena privativa de libertad en primera instancia; ii) Del Auto
Interlocutorio 290/2011, pronunciado por el Juez Primero Cautelar, se puede evidenciar que,
éste dispone la improcedencia y consiguientemente el rechazo de la solicitud de cesación a la
detención preventiva del ahora accionante, por concurrir aún el riesgo procesal de fuga,
conforme los arts. 234.6 y 235.1 del CPP; y, iii) El Juez cautelar y el Tribunal de apelación no
han realizado una correcta valoración de los elementos de prueba en la consideración de la
apelación incidental de la cesación a la detención preventiva al rechazar la misma en base al art.
234.6 del CPP, por lo que debieron tomar en cuenta que corresponde al Ministerio Público
demostrar dichos extremos; pretender exigirle al imputado que demuestre documentalmente que
no tiene otra imputación por otro hecho o que haya recibido sentencia de condena en primera
instancia, concurre la imposibilidad de cumplir con esa exigencia, porque no existe una
institución donde se centralicen esos datos.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

II.1. De fs.2 a 3 vta., cursa imputación formal contra Juan Gabriel Manuyama Gonzales y Juan
Carlos Paredes Montenegro por la presunta comisión del delito de robo agravado, tipificado y
sancionado en el art. 332.2 del Código Penal (CP) y solicitud de aplicación de medidas
cautelares (detención preventiva), fundamenta dicha solicitud en la concurrencia de lo
establecido por el art. 233.1 y 2 en relación a los arts. 234 numerales 1, 2 y 10 y 235 numerales
1, 2 y 3 del mismo Código.

II.2. De fs. 5 a 6, cursa Auto Interlocutorio 149/2011, por el que, el Juez Primero de Instrucción
en lo Penal, dispone la aplicación de la detención preventiva de los imputados Juan Gabriel
Manuyama González y Juan Carlos Paredes Montenegro en aplicación de los arts. 52. 2, 221,
233.1 y 2 en relación al 234 numerales 1, 2, 6 y 235. 1 y 2 todos del CPP.

II.3. A fs. 18 y vta., cursa memorial de solicitud de cesación a la detención preventiva incoada
por el imputado Juan Carlos Paredes Montenegro; y de fs. 19 a 20 vta., acta de audiencia de
cesación a la detención preventiva y Auto Interlocutorio 290/2011, pronunciada por el Juez
Primero de Instrucción, por el que, rechaza la solicitud del ahora accionante, considerando la
concurrencia de los siguientes riesgos procesales: peligro de fuga conforme al art. 234.6 y
peligro de obstaculización conforme al art. 235.1 del CPP.

II.4. A fs. 21 vta., cursa memorial de apelación interpuesto por Juan Carlos Paredes Montenegro
contra el Auto Interlocutorio 290/2011, Resolución que rechaza la solicitud de cesación a la
detención preventiva y a fs. 23 y 24 se encuentra el Auto de 29 de diciembre de 2011, por el que
se confirma el fallo apelado, pronunciado por los ahora demandados.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 175


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante, arguye que se encuentra ilegalmente detenido, cuando por el contrario procedía la
cesación de su detención preventiva, toda vez que, el otro coimputado por el mismo delito, con
idénticos antecedentes, dentro del proceso penal fue favorecido por el mismo Tribunal con
medidas sustitutivas a la detención preventiva.
En consecuencia, corresponde en revisión verificar si tales extremos son evidentes, a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

El art. 23.I de la CPE, determina:” Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal.
La libertad personal solo podrá ser restringida en los límites señalados por ley, para asegurar el
descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales”; y, el art.
13.I de la Ley Fundamental, dispone que: “Los derechos reconocidos por esta Constitución son
inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y progresivos. El Estado tiene el deber
de promoverlos, protegerlos y respetarlos”.

Asimismo, la Declaración Universal de Derechos Humanos, instrumento que forma parte del
bloque de constitucionalidad, en su art. 3 determina: “Todo individuo tiene derecho a la vida, a
la libertad y a la seguridad de su persona”.

De igual forma, el art. 8 de la misma Declaración establece: “Toda persona tiene derecho a un
recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que
violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley”.

Por su parte, el art. 125 de la CPE, establece: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

De conformidad a la disposición constitucional citada, en aplicación y vigencia de la


Constitución Política del Estado, esta acción se encuentra destinada a la protección y defensa de
los derechos a la vida y a la libertad personal; es una acción de carácter extraordinario, de
tramitación especial y sumarísima. Consecuentemente a través de dicha acción, se preserva el
derecho a la vida, se evita una detención ilegal o se repara la ilegal restricción de la libertad o el
procesamiento indebido, manteniendo las características de inmediatez de la protección, el
informalismo, la generalidad y la inmediación; procede contra cualquier autoridad pública, pues
no reconoce fueros ni privilegios.

Ahora bien, solamente puede ingresarse al análisis de la problemática planteada mediante la


acción de libertad, cuando los actos denunciados operan como causa para la amenaza, restricción
o supresión de los derechos a la libertad física y la locomoción, de modo que las lesiones a otros
derechos, no podrán ser compulsadas; sin embargo, y de forma excepcional, serán tutelados la
garantía al debido proceso y el derecho a la defensa, cuando estos fueran la causa “directa” de la
restricción del derecho a la libertad y el accionante hubiese estado en indefensión absoluta.

De la misma manera, la acción de libertad, por la urgencia de la situación, se configura como el


medio más eficaz para restituir los derechos afectados; sin embargo, en caso de existir
mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para
restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 176


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

activados previamente por el o los interesados o afectados; en éstos casos, la acción de libertad
operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse
agotado estas vías específicas.

De lo expuesto precedentemente, debe establecerse que en caso de existir norma expresa que
prevea mecanismos intraprocesales efectivos y oportunos de defensa de estos derechos
fundamentales, deben ser utilizados previamente antes de activarse la tutela constitucional,
aspecto que se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

III.2. De los límites y alcances en relación a la valoración de la prueba en medidas


cautelares

Previamente, antes de ingresar al análisis del caso, corresponde hacer referencia al alcance que
ha establecido el Tribunal Constitucional con respecto a la valoración de la prueba, en las
solicitudes de cesación a la detención preventiva; estableciendo que es una atribución privativa
del juez que ejerce el control jurisdiccional o del que conoce la causa en sus diferentes instancias
y siendo atribución exclusiva de la jurisdicción ordinaria, en una acción de libertad, no le
corresponde al juez de garantías, ni mucho menos al Tribunal Constitucional realizar una nueva
valoración de las prueba, empero, excepcionalmente la jurisdicción constitucional puede realizar
la valoración siempre y cuando se cumplan determinados presupuestos, siendo estos: “…cuando
en dicha valoración a) exista apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad
previsibles para decidir (SC 0873/2004-R y 0106/2005-R, entre otras), o b) cuando se haya
omitido arbitrariamente valorar la prueba y su lógica consecuencia de la lesión de derechos
fundamentales y garantías constitucionales (SC 0129/2004-R, de 28 de enero)…”, líneas
jurisprudenciales reiteradas por las SSCC 0965/2006-R y 0222/2010 de 31 de mayo, entre otras.
0Sentencias mencionadas precedentemente, sólo en el caso de cumplirse los presupuestos
señalados, puede operar el control de constitucionalidad para la restitución de los derechos
vulnerados, entre tanto, no concurran los mismos, el Tribunal no puede realizar una valoración
probatoria, de lo contrario, se convertiría en una instancia casacional o de revisión ordinaria
(entendimiento asumido en la SC 1926/2010-R de 25 de octubre).

Asimismo, siendo que la valoración de la prueba es una facultad privativa de las autoridades
judiciales de la jurisdicción ordinaria; en virtud a los principios de legalidad e inmediación, los
mismos que orientan tanto su incorporación como su ponderación, no se puede rehacer éste
equilibrio (en el caso de darse algunos de los presupuestos señalados) a través de la simple
lectura de actas, por cuanto llevarían a incurrir en subjetivismos, así la SC 0779/ 2011-R de 20
de mayo

III.3.Análisis del caso

En el presente caso, tal como se evidencia de las conclusiones y antecedentes, se tiene que el
Juez Primero de Instrucción cautelar, ha sido la autoridad que ha dispuesto la detención
preventiva del accionante en aplicación de los arts. 52.2, 221 y 233.1 y 2 del CPP en relación a
los arts. 234 numerales 1, 2, 6 y 235.1 y 2 del mismo cuerpo legal; así se evidencia del Auto
Interlocutorio 149/2011 de 13 de agosto.

Ante la solicitud de cesación a la detención preventiva formulada por el accionante, la misma


autoridad, rechazó dicha solicitud por Auto Interlocutorio 290/2011, por considerar la
concurrencia del riesgo procesal de fuga conforme el art. 234.6 del CPP y la concurrencia del
peligro de obstaculización conforme el art. 235.1 del mismo Código.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 177


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Apelada esta Resolución, la Sala Penal Administrativa conformada por los ahora demandados,
confirmó el rechazo a la solicitud de cesación a la detención preventiva a través de la Resolución
de 29 de diciembre del 2011, bajo el argumento de que persiste el peligro de fuga, conforme lo
establecido por el art. 234.6 del CPP, así como el peligro de obstaculización por concurrir lo
establecido en el art. 235.1 del citado Código adjetivo.

De lo referido precedentemente, se establece que los Vocales demandados al dictar el Auto de


Vista de 29 de diciembre de 2011, han obrado conforme sus facultades jurisdiccionales y en uso
de su facultad privativa, realizaron la ponderación de los distintos elementos del proceso,
llegando a la conclusión de que, el accionante no ha desvirtuado la concurrencia de los peligros
procesales señalados.

Consecuentemente, en la valoración probatoria, realizada por los Vocales demandados, no existe


apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad, ni se ha omitido arbitrariamente
valorar la prueba; no existiendo a criterio de este Tribunal los presupuestos señalados en el
Fundamento Jurídico III.2, los mismos establecidos por la SC 0965/2006-R de 2 de octubre y
reiterados por la SC 0222/2010 de 31 de mayo, resulta evidente, que no existe vulneración de los
derechos del accionante, por lo que este Tribunal, no puede realizar, una nueva valoración
probatoria del contenido de las actas de audiencias adjuntas al presente caso en virtud a los
principios de legalidad e inmediación, por cuanto podría incurrir en meros subjetivismos y se
convertiría en una instancia revisora, desnaturalizando su carácter de contralor de la
Constitución Política del Estado.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al conceder la acción tutelar, no ha actuado


correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución 01/2012 de
13 de enero, cursante de fs. 41 a 42 vta., dictada por la Sala Penal y Administrativa del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 178


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0027/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00065-2012 -01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 02/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 190 a 195, pronunciada dentro
de la acción de libertad, interpuesta por Miguel Ángel Blancourt Aguirre en representación
sin mandato de José Andrade, Alex Ferreira Andrade, Marcio Silva Andrade y Marciel
Silva Andrade contra Jorge Castillo Muñoz Juez Noveno de Instrucción en lo Penal del
Tribunal Departamental de Justicia de La Paz; y, Betcy Padilla Rosado, Fiscal de Materia
de Sustancias Controladas.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante mediante memorial presentado el 1 de febrero de 2012, cursante de fs. 88 a 97


vta., refiere, que el 17 de enero del 2011, por orden de la ex Fiscal de Materia Yhilka Hinojosa
Fernández, en la localidad de Guayamerin, Provincia Vaca Diez del Departamento del Beni, sus
representados de nacionalidad brasilera fueron aprehendidos y conducidos “ilegalmente” hasta
la ciudad de La Paz; posteriormente, el 21 de enero del mismo año, dicha autoridad procedió con
la imputación por el delito de legitimación de ganancias ilícitas, con la cual, después de ser
notificados en audiencia de medidas cautelares el Juez Octavo de Instrucción en lo Penal
cautelar del Distrito Judicial de La Paz, sin tener competencia y sin que conste la presencia de
una traductora determinó la detención preventiva.

Arguye que, a un año de su detención, de acuerdo a las actas de requisa personal señalan que
“no se encontraron elementos relacionados al tráfico de sustancias controladas, legitimación de
ganancias ilícitas y lavado de dinero” pese a ello, sin existir prueba alguna y sin conocer las
razones de su detención, fueron sometidos a un proceso penal indebido; donde no se cumplieron
las normas procesales señaladas en el Código de Procedimiento Penal, ya que habiendo
cumplido el plazo de la etapa preparatoria y al haber emitido la conminatoria para presentar el
requerimiento conclusivo, el Juez cautelar demandado, a solicitud extemporánea del Ministerio
Público, decidió ampliar el plazo de la etapa preparatoria, cuando éste ya se encontraba vencido
por más de nueve días.

También refiere que, ante esos vicios procesales, que atentan contra la garantía al debido
proceso y el derecho a la defensa, plantearon dos incidentes de defectos absolutos; sin embargo,
en la audiencia en que debieron considerar y resolver esos aspectos fueron suspendidas en cuatro
oportunidades debido a diferentes razones. En la primera oportunidad el Fiscal de Materia no
concurrió a la audiencia y se pretendió observar la acreditación del traductor que sus

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 179


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

representados presentaron en la audiencia para que los asista, en la segunda la audiencia se


suspendió por haberse dispuesto horario continuo; en la tercera y cuarta oportunidad se
suspendió porque la Fiscal de Materia demandada recusó al Juez demandado.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerados los derechos de sus representados a la libertad de locomoción,


garantía al debido proceso, a la defensa, principio de celeridad y derecho a la seguridad jurídica,
citando al efecto los arts. 21.7, 115.II, 119.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción de libertad y disponga a) Dejar sin efecto la Resolución 65/2011 de
21 de enero, que dispuso la detención preventiva de sus representados; b) Dejar sin efecto la
providencia de 30 de julio de 2011, mediante la cual el Juez demandado dispuso la ilegal
ampliación de la etapa preparatoria; y, c) Encontrándose abundantemente vencido el plazo de la
etapa preparatoria, sin que el Ministerio Público haya presentado su requerimiento conclusivo,
disponer que sus representados sean puestos en libertad de forma inmediata al término de la
audiencia de consideración de la presente demanda.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 2 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
178 a 189 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante, mediante su abogado a tiempo de ratificar en su integridad el memorial de acción


de libertad, en audiencia, manifestó que: 1) Sus representados después de ser aprehendidos y
conforme a las actas de requisa personal realizado por el funcionario policial Adrian Soliz
Villarroel de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), se evidenció que no
existía ningún elemento que esté relacionado con el tráfico de sustancias controladas,
legitimación de ganancias ilícitas y lavado de dinero; pero, a pesar de ello, la ex fiscal de materia
decidió imputarlos formalmente por el delito de ganancias ilícitas; 2) El primer vicio procesal se
verifica en la audiencia de consideración de medidas cautelares de 21 de enero de 2011, donde el
Juez Noveno de Instrucción en lo Penal, no designó al principio de la misma un traductor y es la
fiscal la que posteriormente a la fundamentación oral de su imputación pide que se designe un
traductor y efectivamente aunque sin consultar a sus representados si era de su confianza o no,
según el acta se procedió con la designación a Claudia Martínez Villa, quien además no firma el
acta de dicha audiencia; 3) El consulado de Brasil toma conocimiento del caso en el mes de
marzo de 2011 y lo primero que hizo fue que los ciudadanos demandados presten su declaración
informativa porque al momento de su aprehensión ellos decidieron abstenerse a declarar;
realizado el mismo por más de 5 horas con un traductor la fiscal de materia Yhilka Hinojoza
Fernández, quedó convencida que ellos no habían cometido ningún delito, pero lamentablemente
ésta renuncia fue antes de que pueda emitir algún sobreseimiento; y, 4) La etapa preparatoria del
presente caso se inicia el 21 de enero de 2011 y conforme al art. 134 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), vencía el 21 de julio del mismo año, por lo que el 22 del mismo
mes y año, se solicitó al Juez Octavo de Instrucción en lo Penal, declare vencido el plazo de la
etapa preparatoria y proceda a conminar a la Fiscal de Materia la emisión del correspondiente
requerimiento conclusivo y el 29 de enero de 2011, otro fiscal de materia que no estaba asignado
al caso, solicitó al Juez la ampliación de la etapa preparatoria por el plazo de un año, la misma

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 180


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que fue aprobada violando el art. 134 del CPP, que señala que sólo se autoriza la ampliación
para la aplicación de los delitos de organización criminal.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

La autoridad demandada, Jorge Castillo Muñoz, Juez Noveno de Instrucción en lo Penal,


presentó informe escrito cursante a fs. 177, señalando: i) El proceso caratulado como Ministerio
Público contra Roque Cardozo y otros, por el delito de legitimación de ganancias ilícitas, fue
radicado en el Juzgado a su cargo el 25 de enero de 2012, emergente de una demanda de
recusación planteada por Betty Padilla Rosado, Fiscal de Materia, en contra del Juez Octavo de
Instrucción en lo Penal -Orlando Rojas-, “autoridad que rechazó la misma y dispuso la
aplicación del art. 320 del CPP, ordenando que pasen obrados al juzgado siguiente en número”
(sic); ii) De la revisión de obrados se evidencia que su autoridad no ha realizado actuaciones que
vulneren los derechos y garantías constitucionales de los ahora accionantes, tal como señalan en
la presente acción de libertad, más al contrario se ha providenciado todas las solicitudes tanto de
los ahora accionantes como del Ministerio Público conforme a ley; y, iii) Por lo tanto su
autoridad al haber tomado recién conocimiento de la presente causa, no puede elaborar o dar
lugar a actuaciones que no fueron realizadas por su persona, por lo que solicita se tenga presente
a momento de dictar la respectiva resolución.

Por su parte, Betcy Padilla Rosado, Fiscal de Materia en audiencia pública señaló que: a) El
Ministerio Público conforme corresponde a ley solicitó la aplicación de medidas cautelares de
carácter procesales contra los imputados hoy accionantes, donde el Juez Noveno de Instrucción
en lo Penal valoró todos los elementos de prueba que motivaron la detención preventiva de los
imputados y de los otros co-imputados que fueron puestos a conocimiento del Juez cautelar; b)
La defensa de los imputados manifestó que en la audiencia de medidas cautelares se vulneraron
sus derechos y garantías constitucionales, por no haberse designado un traductor e intérprete del
idioma portugués a favor de sus representados. Hecho que no es evidente, por cuanto la
Resolución 65/2011 de medidas cautelares a la cual hizo mención su abogado es la misma e
indica claramente la participación que tuvo Claudia María Martínez Villa, en su condición de
interprete y sobre el conocimiento del idioma portugués para servir a los imputados hoy
accionantes y transmitirles lo que acontecía en la presente actuación; por lo que, dentro de los
cuadernos de control jurisdiccional, están ampliamente transcritos, con lo que se desvirtúa la
aseveración en sentido de que no había un “intérprete” en esa audiencia; c) Al momento de
hacer las declaraciones informativas policiales en la FELCN, la Fiscal Yhilka Hinojosa, tomó la
precaución de cumplir con el art. 10 del CPP, toda vez que se designó como traductor interprete
a Zenón Urquiza Nina, quien después de informarles el motivo de su aprehensión, se acogieron
al derecho del silencio tal cual señala el art. 92 y ss. del CPP, pese a encontrarse con la presencia
de su intérprete traductor como de su abogado defensor, por lo que no se vulneró ningún derecho
y/ó garantía constitucional.

I.2.3. Resolución

El Juez Sexto de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituido en


Juez de garantías, por Resolución 02/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 190 a 195, “denegó”
la tutela solicitada en base a los siguientes fundamentos: 1) La reiterada y uniforme
jurisprudencia del Tribunal Constitucional, señala que no todas las vulneraciones y
conculcaciones al debido proceso pueden ser reparadas a través de la acción de libertad, sino
solo en aquellos casos en que está directamente vinculado con el derecho a la libertad; 2) En el
presente caso, la parte accionante de manera puntual acusa como acto ilegal la Resolución
65/2011 de 21 de enero, pronunciada por el Juzgado Noveno de Instrucción en lo Penal, que

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 181


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

finalizó con la orden de la detención preventiva de los accionantes, se señala que en ese actuado
procesal no se hubiera nombrado un intérprete, empero de la revisión del acta de audiencia de
medidas cautelares de 21 de enero de 2011, se tiene que el Juez Noveno de Instrucción en lo
penal designo como traductora o interprete a Claudia María Martínez Villa, asimismo de las
actuaciones procesales se establece claramente que la parte accionante no hizo uso del recurso
de apelación que se encuentra previsto en el art. 251 de la CPP, donde podía impugnar y objetar
la supuesta falta de designación de intérprete de los accionantes; 3) Al respecto y con relación a
la subsidiariedad que rige a la acción de libertad, la decantada jurisprudencia del Tribunal
Constitucional, en lo específico las SSCC 0160/2005-R; 0080/2010-R; 2198/2010-R;
0692/2001-R entre otras, señala que cuando la norma procesal ordinaria de manera específica
prevea medios de defensa eficaces y oportunos para resguardar el derecho a la libertad
supuestamente lesionado, estos deben ser utilizados previamente. El recurso previsto en el art.
251 del CPP, dada su configuración procesal, es un recurso idóneo e inmediato de defensa
contra supuestas lesiones y restricciones al derecho a la libertad de los imputados, en el que el
Tribunal superior tiene oportunidad de corregir en su caso, los errores del inferior invocados en
el recurso, es idóneo porque es el recurso adecuado, apropiado, establecido expresamente en la
ley para impugnar las medidas cautelares que vulneren el derecho a la libertad del imputado, en
ocasión de la aplicación de las medidas cautelares. En ese sentido y en coherencia con la
jurisprudencia del Tribunal Constitucional, se tiene que la parte accionante como se mencionó
anteriormente, no interpuso el recurso de apelación previsto en el art. 251 del CPP, que es el
mecanismo rápido e idóneo para precautelar la libertad de las personas, no siendo esta acción
tutelar extraordinaria sustitutiva de los recursos ordinarios que franquea la ley, no existiendo
lesión al debido proceso cuando es el imputado su defensa los que voluntariamente generan su
indefensión. Sobre este punto, también se observa que la autoridad que dispuso la detención
preventiva de los accionantes fue Rolando Sarmiento Tórrez, Juez Noveno de Instrucción en lo
Penal y no así Jorge Castillo Muñoz, quien no tiene legitimación pasiva para ser demandado; 4)
En relación al otro acto ilegal que acusa la parte accionante, es decir la supuesta ampliación
ilegal de la etapa preparatoria, de igual manera el Tribunal Constitucional a través de las SSCC
0478/2002-R; 0625/2005-R; 1351/2005-R; 2397/2010-R entre otras, ha establecido que ante
problemáticas en las que se denuncia procesamiento y detención indebidas por no haberse
declarado la extinción de la acción penal por duración máxima del proceso o la extinción de la
acción penal por prescripción, su análisis no puede efectuarse a través de la acción de libertad, al
constituir una problemática que no se encuentra directamente vinculada con el derecho a la
libertad de locomoción, por no operar como causa de su restricción, y que al ser un extremo que
se encuentra vinculada con la garantía del debido proceso, la parte afectada puede acudir ante la
jurisdicción constitucional con la interpretación del recurso de amparo constitucional, ahora
acción de amparo, una vez agotados los medios y recursos reconocidos en la jurisdicción
ordinaria. Es decir, en el caso en análisis la ampliación de la etapa preparatoria no tiene ninguna
vinculación directa- conforme señala la jurisprudencia del Tribunal Constitucional- con la
libertad de los ahora accionantes, ya que fue la Resolución del Juzgado Noveno de Instrucción
cautelar de 21 de enero de 2011 la que tiene vinculación directa con el derecho a la libertad, que
se reitera no fue apelada en la eventualidad que establece el art. 251 del CPP; y, 5) Con relación
a los incidentes de actividad procesal defectuosa que habría interpuesto la parte accionante, estos
no pueden ser resueltos o dilucidados a través de la acción de libertad, puesto que como señalo
su abogado defensor, dichas solicitudes se encuentran pendientes de resolución, pues las
audiencia señaladas para resolverlas fueron suspendidas por diferentes circunstancias, entre las
que se encuentran las recusaciones presentadas por la Fiscal de Materia, por lo que la presente
acción de libertad no se ajusta a los alcances y al espíritu del art. 125 de la CPE.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 182


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Cursa Resolución de aprehensión de 17 de enero de 2011, emitida por la Fiscal de Materia
Yhilka Hinojosa Fernández, contra Osman Céspedes Torres, Gerthy Céspedes Torres, Marcio
Silva Andrade, Alex Ferreira Andrade y Marciel Silva Andrade, dentro de la investigación por el
delito de Legitimación de ganancias ilícitas (fs. 3 a 5).

II.2. Actas de requisa personal realizado por Adrian Soliz Villarroel Oficial Investigador de la
FELCN el 21 de enero de 2011, contra Marcio Silva Andrade, Alex Ferreira Andrade, y Marciel
Silva Andrade, (fs. 6 a 8).

II.3. El 21 de enero de 2011, mediante memorial dirigida al Juez Octavo de Instrucción en lo


Penal, la Fiscal de Materia Yhilka Hinojosa Fernández, presentó imputación formal y solicita
audiencia de medidas cautelares contra: Osman Céspedes Torres, Gerthy Céspedes Torres,
Marcio Silva Andrade, Alex Ferreira Andrade, Marciel Silva Andrade, José Andrade, Hena
Céspedes Torres, Wanda Torres de Céspedes y Guadalupe Ardaya Pereira de Shorts, por la
comisión del delito de legitimación de ganancias ilícitas (fs. 9 a 37).

II.4. En audiencia de medidas cautelares del 21 de enero de 2011, el Juez Noveno en lo Penal,
en suplencia legal del Juzgado Octavo de Instrucción en lo Penal, dentro del proceso penal
seguido por el Ministerio Público contra Roque Cardozo Oliveira y otros, por el delito de
legitimación de ganancias ilícitas, dispuso mediante Resolución 65/2011, la detención
preventiva en el penal de San Pedro contra Osman Céspedes Tórrez, Marcio Silva Andrade,
Alex Ferreira Andrade, Marciel Silva Andrade, José Andrade, Gerthy Céspedes Tórrez, Hena
Céspedes Torrez, Wanda Torrez de Céspedes y Guadalupe Ardaya Pereira de Shorts (fs. 39 a
59)

II.5. Por memoriales de 13 de abril y 23 de mayo de 2011, dirigidas a la Fiscal de Materia


Yhilka Hinojosa Fernández, los imputados José de Andrade, Alex Ferreira Andrade y Marciel
Silva Andrade, tomando en cuenta que el plazo de 45 días otorgados por el Juez de garantías
feneció, solicitaron se emita requerimiento conclusivo disponiendo el sobreseimiento por no
haber participado en los hechos que se investigan (fs. 60 a 62).

II.6. El 22 de julio de 2011, mediante memorial dirigido al Juez Octavo de Instrucción en lo


Penal, los imputados José de Andrade, Alex Ferreira Andrade y Marciel Silva Andrade,
solicitaron se conmine a la Fiscal de Distrito para presentación de requerimiento conclusivo por
vencimiento del plazo de la etapa preparatoria (fs. 63 a 66).

II.7. El 10 y 11 de agosto de 2011, por memoriales dirigidos al Juez Octavo de Instrucción en lo


Penal, José de Andrade, Alex Ferreira Andrade y Marciel Silva Andrade, plantean incidente de
nulidad de ampliación de plazo de la etapa preparatoria, anunciando acción de libertad, denuncia
por prevaricato y denuncian defectos absolutos e interponen incidente de nulidad, adjuntando en
calidad de prueba, certificado emitido por la Secretaria del Juzgado antes mencionado y el 29 de
agosto solicitan día y hora de audiencia para consideración de incidentes sobre defectos
absolutos (fs. 67 a 82).

II.8. El 23 de septiembre de 2011, mediante memorial dirigido al Juez Octavo de Instrucción en


lo Penal, José de Andrade, Alex Ferreira Andrade y Marciel Silva Andrade, hace conocer
traductor de confianza y el 29 de septiembre del mismo año, solicitan nuevo día y hora de
audiencia para consideración de incidentes sobre defectos absolutos (fs. 83 a 84 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 183


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.9. Mediante memorial de 17 de diciembre de 2011, la Fiscal de Materia de Sustancias


Controladas Adscrita a la FELCN, Betcy Padilla Rosado, dirigido al Juez Octavo de Instrucción
en lo Penal, dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Roque Cardozo y
otros, plantea recusación en contra de dicha autoridad judicial, el mismo que mediante Auto
Interlocutorio de 19 de diciembre del mismo año fue rechazado (fs. 85 a 87).

II.10. El 2 de febrero de 2012, Jorge Castillo Muñoz, Juez Noveno de Instrucción en lo Penal,
presentó informe escrito, donde señaló que el proceso caratulado como Ministerio Público
contra Roque Cardozo y otros, por el delito de legitimación de ganancias ilícitas, fue radicado en
el juzgado a su cargo el 25 de enero de 2012, emergente de una demanda de recusación
planteada por Betty Padilla Rosado, Fiscal de Materia, en contra del Juez Octavo de Instrucción
en lo Penal -Orlando Rojas-, “autoridad que rechazo la misma y dispuso la aplicación del art.
320 del CPP, ordenando que pasen obrados al juzgado siguiente en número” (fs. 177).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, alega la vulneración de sus derechos de sus representados a la libertad de


locomoción, garantía del debido proceso, a la defensa, principio de celeridad y derecho a la
seguridad jurídica; toda vez, que las autoridades demandadas: a) En audiencia de medidas
cautelares a falta de traductor o interprete mediante Resolución 65/2011 de 21 de enero,
dispusieron la detención preventiva de sus representados; y, b) Una vez vencido el término de la
etapa preparatoria, y pese haber solicitado al Juez demandado la conminatoria para que el
Ministerio Público presente requerimiento conclusivo sobre el presente caso, el Juez Octavo de
Instrucción en lo Penal de manera ilegal resolvió ampliar el plazo de dicha etapa preparatoria.
Por lo expuesto, corresponde ahora analizar, en revisión, si en el caso concreto se debe otorgar o
no la tutela solicitada, tarea que será realizada a continuación.

III.1. Respecto a la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

Conforme a la jurisprudencia sentada por el Tribunal Constitucional, la SC 0008/2010-R de 6 de


abril, estableció que: “…el recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, se constituye en
el medio idóneo y eficaz para conocer y restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que
pueda atentar al derecho a la vida, la libertad o constituir una persecución o procesamiento
indebido que atente o ponga en peligro el derecho a la libertad, empero para ello, previamente
se deben agotar los mecanismos de protección específicos de defensa que sean idóneos,
eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento
indebido, operando la acción de libertad solamente en caso de no haberse restituido los
derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas”.

En consecuencia y siguiendo el mismo entendimiento jurisprudencial SC 1026/2010 de 23 de


agosto, señaló que: ”…ante la denuncia de una supuesta ilegal aprehensión, arresto u otra
forma de restricción de la libertad por parte del Fiscal o de la Policía, la o el accionante,
previo a acudir a la jurisdicción constitucional, debe en principio denunciar todos los actos
restrictivos de su libertad ante el juez cautelar, aún si el fiscal no hubiera dado aviso del inicio
de la investigación dentro de las veinticuatro horas como es su obligación de acuerdo con lo
prescrito en la parte in fine del art. 298 del CPP, toda vez que, el juez de instrucción es el
encargado de ejercer el control jurisdiccional de la investigación y específicamente, de los
actos del Ministerio Público y de los funcionarios policiales, conforme prescriben los arts. 54.
inc. 1) y 279 del CPP” (las negrillas son nuestras).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 184


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Bajo dicho razonamiento jurisprudencial la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, estableció aspectos


que se deben tener en cuenta, en los cuales de manera excepcional, no es posible ingresar al
fondo de la acción de libertad, a objeto de guardar equilibrio y complementariedad entre la
jurisdicción ordinaria y la constitucional, fijando al efecto tres supuestos, a efectos de resolver la
presente acción. En el presente caso se desarrollará simplemente el primer supuesto, mismo que
está referido a que: “Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía
cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y
todavía no existe aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez
cautelar de turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es
decir, con el aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad
jurisdiccional, es ante ella donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a
sus derechos. De no ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que
el soberano a través del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez
constitucional en el control de la investigación” (el subrayado y las negrillas nos pertenecen).

De otro lado, la misma sentencia constitucional citada supra, estableció aquellas circunstancias
en las que por el daño inminente e irreparable no es posible aplicar los supuestos anteriores, y
corresponde ingresar al análisis de fondo, ello en virtud a la naturaleza jurídica, finalidad y los
derechos tutelados por esta acción de defensa, los mismos son:

a) Cuando está en peligro el derecho a la vida a causa de la lesión al derecho a la libertad por
la persecución, procesamiento o detención indebidos.

b) Al haber privación de libertad y evidente negligencia o dilación por parte de las autoridades
que rigen la actividad procesal penal, -por ejemplo si fijan audiencias de consideración con
plazos no razonables, la injustificada suspensión, entre otras circunstancias

c) Si existe amenaza o privación al derecho a la libertad física, provocada por un


procesamiento indebido, y el agraviado -o accionante-, está en absoluto estado de indefensión,
sin posibilidad de defensa idónea en el proceso ordinario, y el hecho denunciado es la causa
directa de esa situación de emergencia, amenaza o lesión relacionada a la libertad física”

III.2. Análisis del caso concreto

En el presente caso, el accionante, alega la vulneración de los derechos de sus representados a la


libertad de locomoción, garantía debido proceso, a la defensa, principio de celeridad y derecho a
la seguridad jurídica; toda vez, que las autoridades demandadas en audiencia de medidas
cautelares a falta de traductor mediante Resolución 65/2011 de 21 de enero, dispusieron la
detención preventiva. Asimismo, una vez, vencido el término de la etapa preparatoria y pese
haber solicitado al Juez demandado la conminatoria para que el Ministerio Público presente
requerimiento conclusivo, el Juez Octavo de Instrucción en lo Penal de manera ilegal resolvió
ampliar el plazo.

Del análisis de los datos procesales que cursan en obrados se establece que los imputados hoy
accionantes fueron objeto de detención preventiva ordenada por el Juez Noveno en lo Penal, en
suplencia legal del Juzgado Octavo de Instrucción en lo Penal, como resultado del proceso penal
seguido por el Ministerio Público por la presunta comisión del delito de legitimación de
ganancias ilícitas, en el que la Fiscal de Materia Yhilka Hinojosa Fernández, presentó
imputación formal y solicitud de aplicación de medidas cautelares; asimismo, se evidencia que a
fin de evitar la indefensión de los imputados de nacionalidad brasilera, de acuerdo al acta el Juez
Noveno de Instrucción en lo Penal, éste designo y tomó juramento como traductora a Claudia

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 185


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

María Martínez Villa; empero, los actos irregulares que se reclaman no fueron expuestos o
reclamados al Juez cautelar, como tampoco se recurrió de apelación conforme a lo previsto por
el primer párrafo del art. 251 del CPP, que a la letra dice: “La resolución que disponga,
modifique o rechace las medidas cautelares, será apelable, en el efecto no suspensivo, en el
término de setenta y dos horas”; donde podía impugnar y objetar la supuesta falta de traductor o
traductora.

Por otra parte, se tiene también que la ampliación de la etapa preparatoria y todo el trámite se
hizo bajo la conducción de Rolando Sarmiento, Juez Noveno de Instrucción en lo Penal con
suplencia legal, contra quien no se interpuso la presente demanda, por lo que no es procedente
dirigir la acción de libertad contra Jorge Castillo Muñoz, Juez Noveno de Instrucción en lo
Penal, quien asumió jurisdicción y competencia recién desde el 25 de enero de 2012, por lo que
se le exime de cualquier tipo de responsabilidad.

En consecuencia, ante la denuncia de una supuesta ilegal aprehensión, arresto o que no se


hubiera presentado acusación final dentro de los plazos establecidos en el art. 134 del CPP, u
otra forma de restricción de la libertad el accionante, previo a acudir a la jurisdicción
constitucional, debió en principio denunciar todos los actos restrictivos de su libertad ante el
Juez cautelar; toda vez que dicha autoridad, es el encargado de ejercer el control jurisdiccional
de la investigación y de todos los actos que se desarrollen dentro de un determinado proceso
penal. Circunstancia que en aplicación de la jurisprudencia citada en el Fundamento Jurídico
precedente se deniegue la tutela solicitada, sin ingresar al análisis de fondo de la problemática
planteada.

Por lo precedentemente señalado, el Juez de garantías, al haber “denegado” la tutela, efectuó


una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y aplicó debidamente los alcances de esta
acción tutelar.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 186


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0028/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00021-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 18 de enero de 2012, cursante de fs. 101 a 104, pronunciada dentro
de la acción de libertad, interpuesta por Julio Antonio Uzquiano Howard contra Javier Pérez
Colque, Juez Sexto de Instrucción en lo Penal; y Ever Richard Veizaga Ayala y Gina Luisa
Castellón Ugarte, Vocales de la Sala Penal Segunda, todos del Tribunal Departamental de
Justicia de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de demanda

Por memorial presentado el 17 de enero de 2012, cursante de fs. 44 a 47 vta., el accionante


expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Se encuentra detenido preventivamente desde 23 de septiembre de 2010, en mérito a una


Resolución de la misma fecha, dictada por la entonces Jueza Sexta cautelar del Distrito Judicial
de Cochabamba, Celina Herbas Herbas; posteriormente, el 13 de octubre del mismo año, solicitó
de manera reiterada la cesación de su detención preventiva, empero, dichas audiencias fueron
suspendidas a consecuencia de una serie de recusaciones infundadas planteadas por los
querellantes y otras dilaciones atribuibles al órgano judicial, transcurriendo más de seis meses
sin que se hubieran llevado a efecto dichas audiencias.

Señala que, el 25 de abril de 2011 instalada la audiencia de consideración de cesación de su


detención preventiva, -solicitada seis meses atrás, a la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal,
en suplencia legal de su similar Sexto (ante quien se tramitaba la causa)-, se suspendió dicho
acto procesal con un simple proveído y con el argumento que el “Auto” que determinó su
detención, carecía de fundamentación jurídica, cuando por ello debió llevar a cabo la audiencia a
fin de disponer mediante resolución su libertad, por cuanto el accionante se encontraría
ilegalmente detenido. Ante ello, el 7 de mayo de ese año, interpuso recurso de reposición y
apelación contra el Auto de 25 de abril del mismo año; sin embargo, la indicada Jueza,
infringiendo derechos y garantías constitucionales determinó que se esté a lo que fuere a
determinarse en la apelación incidental, ocasionando con ello retardación de justicia por no
haber resuelto el recurso planteado conforme el art. 402 del Código Procedimiento Penal (CPP).

Refiere que, el recurso de apelación incidental fue resuelto por la Sala Penal Primera, por Auto
de Vista de 19 de septiembre 2011, el cual confirmó el Auto de 25 de abril de ese año, en
relación a las medidas cautelares de carácter real, disponiendo que la Jueza Primera de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 187


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Instrucción en lo Penal, resuelva el recurso de reposición planteada. Contra estas ilegalidades, el


accionante formuló una anterior acción de libertad contra la Jueza Primera de Instrucción en lo
Penal, que fue rechazada con el fundamento que aún quedaba pendiente de realización la
audiencia de cesación a la detención preventiva, conminando a la autoridad demandada, resuelva
el recurso de reposición y lleve a cabo la audiencia de cesación.

A lo anterior, se suma que el accionante fue notificado con la Resolución de 25 de octubre de


2011, por la que el Juez Sexto de Instrucción en lo Penal agravó sus derechos al debido proceso
y a la libertad, al señalar que ve impedido -por incompetencia- de llevar a efecto la audiencia de
cesación a la detención preventiva, afirmando que debe resolver con prioridad el recurso de
reposición dentro del plazo de veinticuatro horas; Resolución contra la cual el impetrante
solicitó auto motivado.

Casi después de un año de solicitada la cesación de su detención, el 22 de noviembre de 2011, se


llevó a cabo la audiencia correspondiente ante el Juez Sexto de Instrucción en lo Penal, quien no
otorgó validez alguna al proveído de la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal -entonces en
suplencia-, autoridad que, en su momento, determinó que la detención preventiva no cumplía
con lo previsto por el art. 236.3 del CPP, al no estar determinados los riesgos procesales; más al
contrario, el Juez ahora demandado, arbitrariamente legalizó la Resolución de 23 de septiembre
de 2010, así también señaló que se encontraría fuera de lugar lo instituido por la Jueza que actuó
en suplencia.

Ante tal determinación, el 25 de noviembre de 2011, el accionante interpuso recurso de


apelación incidental, que fue tramitado por la Sala Penal Segunda demandada, que igualmente
infringió sus derechos y garantías constitucionales, fundamentando que la parte solicitante tanto
en audiencia de cesación como en apelación incidental, no cumplió con lo establecido en el art.
239 del CPP; al no aportar nuevos elementos que desvirtúen los riesgos procesales por los cuales
se le aplicó dicha medida cautelar; posteriormente, en la vía de la enmienda y complementación,
cuestionó que en el acta de 23 de septiembre de 2010, no se colegía qué riesgos procesales se le
estaban atribuyendo, a lo que el Tribunal de alzada “respondió esa parte se encontraba oscura”
(sic) disponiendo no ha lugar dicha a solicitud.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, estima vulnerados sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la “seguridad


jurídica”, citando al efecto los arts. 21 inc. 7), 23.I y III y 115 de la Constitución Política del
Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes, solicita se declare “procedente” la acción, disponiéndose su libertad


inmediata, así como el restablecimiento del debido proceso y la reparación de daños y
perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Efectuada la audiencia pública el 18 de enero de 2012, en presencia del accionante asistido por
su abogado patrocinante y del Juez demandado; ausentes los Vocales codemandados y el
representante del Ministerio Publico, según consta en el acta cursante de fs. 99 a 100 vta., se
produjeron los siguientes actuados:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 188


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante, mediante su abogado, ratificó el tenor integro de la demanda y en el ejercicio de


su derecho a la réplica, afirmó que no se puede desvirtuar el “decreto” de 25 de abril de 2011,
emitido en suplencia por la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal, por cuanto en ejercicio de
su función como contralora de derechos y garantías, reconoció la ausencia de requisitos de ley
para imponer la detención preventiva; a más de ello, “no se sabia que por un recurso de
reposición se anula (…) el decreto 25 de abril de 2011” (sic). Finaliza admitiendo que acudió a
la jurisdicción constitucional anteriormente mediante una similar acción.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Javier Pérez Colque, Juez Sexto de Instrucción en lo Penal, a través de informe escrito cursante
de fs. 97 a 98 y en audiencia, afirmó: a) El 15 de octubre de 2011, asumió como titular del
Juzgado Sexto de Instrucción Penal, tomando conocimiento del proceso que se le sigue al
accionante; b) Dicha causa, tiene pliego acusatorio formal por la presunta comisión de delito de
estafa y otros, mismo que fue saneado y posteriormente remitido al Tribunal Primero de
Sentencia, el 27 de julio de ese año; sin embargo, esta instancia dispuso la devolución de
actuados al Juzgado de origen, cuya autoridad -entonces en suplencia- nuevamente ordenó la
remisión de antecedentes ante el referido Tribunal, aclarando que hasta el 14 de octubre del
mismo año, el Juzgado del que es titular aún se encontraba en acefalia; c) Aclaró que, Julio
Antonio Uzquiano Howard fue detenido preventivamente por Resolución de 23 de septiembre
de 2010, emitida por la entonces Jueza Sexta de Instrucción en lo Penal. Posteriormente,
mediante proveído de 25 de abril del 2011, la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal, en
suplencia del Juzgado Sexto, suspendió la audiencia de cesación de detención preventiva;
Resolución contra la cual, el accionante interpuso recursos de reposición y apelación, última que
fue resuelta por la Sala Penal Primera, anulando obrados y disponiendo la remisión de
antecedentes ante el Juzgado Sexto, que resolvió aceptando la reposición, a través de Resolución
de 12 de noviembre de ese mismo año y, en consecuencia, señaló audiencia para el 22 de igual
mes y año; d) Llevado a cabo dicho acto procesal, se dejó sin efecto la Resolución de 25 de abril
de 2011, sobre la cual la parte querellada sustentó el argumento de su solicitud de cesación; y, e)
La aplicación de medidas cautelares, se sustentó en “el tenor de los riesgos procesales”, con la
finalidad de resguardar la seguridad jurídica, por lo que no se vulneró derecho alguno.

Gina Luisa Castellón Ugarte y Ever Richard Veizaga Ayala, Vocales de la Sala Penal Segunda
del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, mediante informe escrito cursante de fs.
62 a 63, indicaron lo siguiente: 1) A través del Auto de Vista de 12 de enero de 2012,
confirmaron la Resolución pronunciada por el Juez a quo, quien rechazó la solicitud de cesación,
con el fundamento que el imputado -ahora accionante- no desvirtuó los peligros procesales
concurrentes; 2) En ese orden, respecto al trabajo, no presentó prueba alguna que demuestre una
ocupación lícita y cuente con un domicilio; 3) Referente a peligro de obstaculización, la defensa
no acompañó elementos que desvirtúen dicho presupuesto; 4) Con relación al reclamo de
aprehensión ilegal, al no haber sido reclamado en su oportunidad, el Tribunal de alzada no pudo
considerar dicha circunstancia porque correspondía a la autoridad judicial inferior ejercitar el
control jurisdiccional de acuerdo art. 54.1 del CPP; y, 5) El accionante, no agotó mecanismos
ordinarios de impugnación al no denunciar oportunamente la presunta aprehensión ilegal, por lo
que solicitaron se deniegue la tutela y sea con costas.

I.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 189


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La Jueza Primera de Sentencia, constituida en Jueza de garantías, dictó la Resolución de 18 de


enero de 2012, cursante de fs. 101 a 104, por la que denegó la tutela solicitada, con costas, con
los siguientes fundamentos: i) La Resolución de 25 de abril de 2011, fue dejada sin efecto
mediante otra de 12 de noviembre de ese año, que resolvió el recurso de reposición, llevándose
audiencia pública de cesación a la detención preventiva el 22 de mismo mes y año; ii) El
accionante no se encuentra ilegalmente privado de libertad, puesto que fue imputado
formalmente y se dispuso su detención preventiva, conforme establece el art. 233.1 y 2 del CPP;
circunstancia que no fue impugnada por el imputado, al contrario, el 13 de octubre de ese año,
solicitó audiencia de cesación al amparo del art. 239.1 del mismo Código, consintiendo con ello
la Resolución emitida, además que tampoco durante la etapa preparatoria reclamó la presunta
vulneración; iii) Lo decidido por el Juez Sexto de Instrucción en lo Penal, en relación a la
cesación de la detención preventiva, se enmarcó a lo establecido en la norma adjetiva penal; así,
en dicha audiencia la defensa pretendió hacer prevalecer el decreto de 25 de abril del mismo
año, no obstante que ese actuado quedó sin efecto a consecuencia de la Resolución de 12 de
noviembre de igual año, para posteriormente resolverse la reposición formulada; por lo que este
aspecto no correspondía ser analizado por el Juez ahora demandado, sino los nuevos elementos
aportados por el imputado para contrastarlos con los fundamentos de la aplicación de la medida
cautelar de 23 de septiembre de 2010; iv) El Tribunal de alzada circunscribió su competencia a
revisar la Resolución que resolvió el Juez de primera instancia, limitando dicho accionar a
verificar si se aplicaron o no las exigencias previstas; v) Julio Antonio Uzquiano Howard, tenía
mecanismos procesales de impugnación contra la aplicación de medidas cautelares; sin
embargo, en su oportunidad no planteó los recurso previstos por ley; por lo cual, convalidó la
actuación supuestamente ilegal; y, vi) La presunta dilación no es atribuible a las autoridades
jurisdiccionales ahora demandadas, como tampoco el supuesto incumplimiento del art. 236.3 del
CPP.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. El 21 de mayo de 2010, la Fiscal de Materia imputó formalmente a Julio Antonio Uzquiano
Howard, por el presunto delito de estafa agravada, solicitando su detención preventiva conforme
a la previsión legal prevista por los arts. 233.1 y 2, 234.1.2 y 5 y 235.1.2 y 4 del CPP (fs. 70 a
72).

II.2. De fs. 6 a 13, cursa el acta de audiencia pública de aplicación de medidas cautelares de 23
de septiembre de 2010, celebrada ante la Jueza Sexta de Instrucción en lo Penal, que concluyó
en disponer la detención preventiva del imputado -Julio Antonio Uzquiano Howard- en el penal
de “San Sebastián” de Cochabamba.

II.3. Julio Antonio Uzquiano Howard, por memorial presentado el 14 de octubre de 2010,
solicitó la cesación de su detención preventiva, alegando la existencia de nuevos elementos de
juicio que demuestran que no concurren los motivos que dispusieron la restricción de su libertad
(fs. 80 a 82 vta.).

II.4. Del acta de audiencia pública de 25 de abril de 2011, destaca que la Jueza Primera de
Instrucción Penal, en suplencia legal de su similar Sexto, dispuso “sin lugar a considerar la
cesación” (sic) interpuesta por el imputado Julio Antonio Uzquiano Howard, señalando que de
la revisión de los antecedentes referidos al acta y Resolución de aplicación de medidas
cautelares de 23 de septiembre de 2010, en su redacción no se habría observado lo previsto en el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 190


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

art 236.3 del CPP, por cuanto no constarían de manera expresa los fundamentos que dieron lugar
a la detención preventiva (fs. 14 y vta.).

II.5. Posteriormente, por memorial de 7 de mayo de 2011, Julio Antonio Uzquiano Howard
interpuso recurso de reposición contra el proveído de 25 de abril de 2011, haciendo constar que
no se podía suspender la audiencia, más aún, habiendo constatado que la Resolución que
determinó su detención preventiva carecía de fundamentación jurídica; por lo que solicitó a la
Jueza Sexta de Instrucción en lo Penal, revoque dicho proveído y señale nuevo día y hora de
audiencia (fs. 84 y vta.). Simultáneamente y a través de otro escrito, planteó apelación incidental
contra el acta y el indicado proveído (fs. 85); ante lo cual, la Jueza mediante decreto de 10 de
mayo de ese año, dispuso que el impetrante esté “a lo determinado mediante memorial de 7 de
abril del año en curso con referencia a la apelación incidental planteado por esta parte respecto
al proveído de fecha 25 de abril de 2011” (sic) (fs. 21).

II.6. Por Auto de Vista de 19 de septiembre de 2011, la Sala Penal Primera, confirmó la
Resolución de 25 de abril de ese año, en relación a la medida cautelar real impuesta a Julio
Antonio Uzquiano Howard; y respecto a la providencia de la misma fecha, anuló obrados,
disponiendo al Juez a quo resuelva el recurso de reposición planteado en función al art. 402 del
CPP (fs. 15 a 16 vta.).

II.7. El Juez Sexto de Instrucción en lo Penal, por Resolución de 12 de noviembre de 2011,


regularizando procedimiento, aceptó el recurso de reposición interpuesto por el imputado y dejó
sin efecto el proveído de 25 de abril de ese año, señalando audiencia para la consideración de la
cesación de la detención preventiva de Julio Antonio Uzquiano Howard, para el 22 de
noviembre de igual año (fs. 91 y vta.).

Ya en la audiencia pública de referencia, el indicado Juez cautelar rechazó la solicitud de


cesación, dejando subsistente la Resolución que dispuso la detención preventiva de Julio
Antonio Uzquiano Howard -detallada en la Conclusión II.2-, al no haberse desvirtuado lo
previsto por los arts. 233.1 y 2, 234.1.2.5 y 11 y 235.1 y 2 del CPP, modificados en lo pertinente
por la Ley de Modificaciones al Sistema Normativo Penal, conforme establece el art. 239 del
mismo Código (fs. 30 a 34).

II.8. Julio Antonio Uzquiano Howard, por memorial presentado el 25 de noviembre de 2011,
interpuso apelación incidental contra la Resolución de 22 de ese mes y año (fs. 36 a 38); recurso
que fue resuelto por la Sala Penal Segunda, mediante Auto de Vista de 12 de enero de 2012, por
el que se declaró improcedente el recurso planteado y confirmó la Resolución impugnada (fs. 59
a 61 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante refiere que, sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la “seguridad


jurídica”, fueron vulnerados tanto por el Juez, como por los Vocales -ahora demandados-, por
cuanto solicitó la cesación de su detención preventiva, cuya audiencia no pudo llevarse a efecto
por decisión de la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal en suplencia, quien mediante decreto
dispuso la no consideración de la cesación, alegando falta de fundamentación en la Resolución
que dispuso la detención del imputado; no obstante que, precisamente por esta falencia,
correspondía disponerse la libertad del encausado. Planteados tanto el recurso de reposición
como el de apelación, dicha autoridad no resolvió el primero de ellos, disponiendo que se esté
primero a lo que fuera a resolverse en alzada; así, una vez en conocimiento de la causa el Juez
demandado, de manera ilegal, se rehusó a tramitar lo dispuesto por el Auto de Vista de 19 de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 191


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

septiembre de 2011, referido a la nulidad del proveído 25 de abril de ese año, alegando
incompetencia y ordenando se lleve a efecto la audiencia de consideración de cesación de
detención preventiva, legalizando la Resolución ilegal de detención preventiva; aspecto que fue
igualmente convalidado por los Vocales codemandados, quienes señalaron que no se habría
aportado nuevos elementos para desvirtuar los riesgos procesales. En consecuencia, corresponde
determinar si los hechos demandados son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela
solicitada.

III.1. Alcances de la tutela de la acción de libertad, frente a supuestas lesiones al debido


proceso

Al efecto, corresponde hacer referencia a la SC 1520/2011-R de 11 de octubre, que señaló:


“Según la configuración prevista en el art. 125 de la CPE, el ámbito de protección de la acción
de libertad se amplía inclusive a la vida, amenazada como consecuencia de la privación o
restricción del derecho fundamental a la libertad, al disponer que: 'Toda persona que considere
que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o
privada de libertad personal, podrá interponer Acción de libertad y acudir, de manera oral o
escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier
juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la
persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la
libertad'. Así, a través de la SC 0451/2010-R de 28 de junio, se precisaron las condiciones en
las que se viabiliza su tutela, indicando lo siguiente: '… a) Cuando considere que su vida está
en peligro; b) Que es ilegalmente perseguida; c) Que es indebidamente procesada; y, d) O
privada de libertad personal'.

Conforme a lo antedicho, cuando en la jurisdicción constitucional se invoque una presunta


lesión al debido proceso en la sustanciación de una causa, es necesario que el acto lesivo
alegado sea la causa directa de la supresión o restricción del derecho a la libertad física. En
ese entendido y considerando estos supuestos, la jurisprudencia emanada de este Tribunal
delimitó los alcances de la tutela otorgada por la acción de libertad, bajo los siguientes
términos:'…en la SC 0619/2005-R de 7 de junio, este Tribunal señaló: <Consiguientemente, a
partir de la doctrina constitucional sentada en la SC 1865/2004-R de 1 de diciembre, para que
la garantía de la libertad personal o de locomoción pueda ejercerse mediante el recurso de
hábeas corpus cuando se denuncia procesamiento ilegal o indebido deben presentarse, en
forma concurrente, los siguientes presupuestos: a) el acto lesivo, entendido como los actos
ilegales, las omisiones indebidas o las amenazas de la autoridad pública, denunciados, deben
estar vinculados con la libertad por operar como causa directa para su restricción o supresión;
b) debe existir absoluto estado de indefensión, es decir, que el recurrente no tuvo la
oportunidad de impugnar los supuestos actos lesivos dentro del proceso y que recién tuvo
conocimiento del mismo al momento de la persecución o la privación de la libertad>…

En síntesis, la acción de libertad sólo es procedente cuando el acto lesivo se encuentra


estrechamente vinculado con el derecho a la libertad, como causa directa; es decir, con su
restricción, supresión o amenaza de estas lesiones y en el supuesto de evidenciarse absoluto
estado de indefensión; caso contrario, la parte accionante deberá acudir a la instancia
pertinente cuando se alegue vulneración al debido proceso'” (las negrillas no corresponden al
texto original) (SC 1030/2010-R de 23 de agosto).

III.2. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 192


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De acuerdo a los datos que informa el proceso, el accionante considera lesionado su derecho a la
libertad, por cuanto estando detenido preventivamente, desde el 23 de septiembre de 2010, a
consecuencia del proceso penal seguido en su contra por el Ministerio Público, por el supuesto
delito de estafa agravada, con la agravante del art. 346 BIS del CP, el 14 de octubre del mismo
año, solicitó la cesación de su detención preventiva a la Jueza Primera de Instrucción en lo
Penal, quien se encontraba en suplencia del titular ahora demandado, audiencia pública que si
bien fue instalada el 25 de abril de 2011; es decir, luego de casi seis meses, no fue llevada a
cabo, alegándose una supuesta dilación en la tramitación de la audiencia de cesación a la
detención preventiva, aspecto que no puede ser compulsado mediante la presente acción tutelar,
por cuanto la autoridad que conoció inicialmente dicha solicitud, no fue demandada a través de
esta acción.

Ahora bien, respecto a que instalada la audiencia en la fecha referida, la Jueza a cargo del
control jurisdiccional, en vez de tramitar y resolver la solicitud de cesación a la detención
preventiva, determinó en dicho acto procesal -mediante decreto de 25 de abril de 2011- que no
consideraría la cesación, afirmando que de la revisión del acta y Resolución de aplicación de
medidas cautelares de 23 de septiembre de 2010, no se habría observado lo previsto por el art.
236.3 del CPP, -es decir, que carecería de fundamentación-, ante lo cual el accionante por
memorial de 7 de mayo de 2011, interpuso recurso de reposición contra dicho proveído,
haciendo constar que no debía suspenderse la audiencia, más aún al advertirse que su detención
preventiva carecía de fundamentación jurídica; lo que suscitó que pida a esa autoridad, revoque
el decreto y señale nuevo día y hora de audiencia. De la misma manera, por memorial de la
referida fecha, planteó apelación incidental contra el mismo proveído; en respuesta a dicha
solicitud, la Jueza de Instrucción en lo Penal, mediante decreto de 10 de ese mes y año, dispuso
que se esté a lo determinado mediante memorial de 7 de abril del mismo año, con referencia a la
apelación incidental planteada respecto al proveído de 25 de abril de 2011.

A consecuencia de la interposición de la apelación, la Sala Penal Primera, por una parte,


confirmó la Resolución apelada y respecto a la providencia de 25 de abril de 2011, anuló
obrados, determinado que el Juez a quo resuelva el recurso de reposición; sin embargo, el Juez
Sexto de Instrucción Penal demandado, por Resolución de 12 de noviembre de igual año,
“aceptó” el recurso de reposición interpuesto y dejó sin efecto el proveído en cuestión,
señalando en consecuencia audiencia para la consideración de la cesación de la detención
preventiva para el 22 de ese mes y año.

Conforme lo descrito precedentemente y de las piezas procesales arrimadas al legajo procesal, se


establece que los supuestos actos ilegales lesivos al debido proceso, respecto a la nulidad
alegando incompetencia, no son la causa directa para la supresión o restricción de la libertad
física del accionante, por cuanto éste dejó sin efecto el proveído de 25 de abril de 2011, por el
que se habría establecido que la aplicación de medidas cautelares fue ordenada sin la
fundamentación adecuada y, más bien, fijó fecha y llevó a efecto la consideración de la cesación
de la detención preventiva el 22 de noviembre de 2011. Por otra parte, en dicha audiencia se
rechazó la cesación y dejó subsistente la Resolución que dispuso la detención preventiva de
Julio Antonio Uzquiano Howard; es decir, que no existiría lesión alguna al derecho a la libertad
del accionante, por cuanto si bien continúa preventivamente detenido, es a consecuencia de no
haber desvirtuado -en audiencia de cesación- los elementos de juicio que llevaron a la autoridad
jurisdiccional a disponer dicha medida; por ello, se evidencia que el Juez ahora demandado, no
incurrió en ningún acto ilegal, más al contrario, viabilizó la solicitud de cesación dentro de un
plazo razonable una vez que asumió la titularidad del juzgado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 193


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Respecto a los supuestos actos ilegales cometidos por los Vocales de la Sala Penal Primera,
ahora demanda, dichas autoridades circunscribieron su actuar a resolver el recurso de apelación
de la Resolución que rechazó la solicitud de cesación a la detención preventiva, verificando el
cumplimiento de lo previsto por el art. 239 del CPP, por lo que igualmente dichas autoridades no
lesionaron los derechos del accionante.

Consiguientemente, la Jueza de garantías, al denegar la acción, efectuó una adecuada compulsa


de los antecedentes procesales y realizó un correcto análisis de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 y 31 de la Ley
del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve: DENEGAR la tutela.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0029/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad
Expediente: 00004-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 10 de enero de 2012, cursante de fs. 26 vta. a 29 vta., pronunciado,


dentro de la acción de libertad interpuesta por Micaela Beatriz Antezana Navia en
representación de José Alfonso Antezana Cornacchia, contra Heiddy Zapata Montaño Jueza
Segunda del Tribunal de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de
Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 9 de enero de 2012, cursante de fs. 13 a 15, la accionante expone los
siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La accionante, manifiesta que en el proceso penal seguido por Freddy Zambrana Espinoza
contra José Alfonso Antezana Cornacchia, ante el Tribunal Segundo de Sentencia, por los
delitos de falsedad material, ideológica y uso de instrumento falsificado, previsto en los arts.
198, 199 y 203 del Código Penal (CP), se dictó sentencia condenatoria, con la pena privativa de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 194
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

libertad de 4 años en la cárcel pública de “San Sebastián” varones de Cochabamba, la


mencionada sentencia no fue ejecutada, debido a que el acusador particular devolvió el
respectivo mandamiento de condena ante el referido Tribunal, el Ministerio Público, antes de la
celebración del juicio oral retiró su acusación pública, empero, según mandamiento de condena
de 28 de diciembre de 2011, expedido por la Jueza Segundo del Tribunal de Sentencia se ejecutó
la misma, permaneciendo aún en el recinto carcelario.

Manifiesta que, debido a un descuido involuntario que incurrió, no tramitó el beneficio que la
ley penal le otorga, de conformidad al art. 105 inc. 2) del CP, por lo cual la pena impuesta a José
Alfonso Antezana Cornacchia ha prescrito el 1 de agosto de 2010, dado que fue notificado con
la sentencia condenatoria el 1 de agosto de 2003, descuido que corrigió al haber presentado el 23
de diciembre de 2011, la solicitud de prescripción de la pena ante el tribunal referido; el 27 de
diciembre del mismo año, dicho tribunal dispone se imprima el trámite de ley dispuesto por el
art. 314 del Código de Procedimiento Penal (CPP).

Refiere que, el 28 de diciembre de 2011, personas ajenas al fenecido proceso penal, solicitan al
tribunal señalado, se expida mandamiento de condena en su contra, el mismo día
sorprendentemente y con celeridad, se emite el auto que dispone la emisión de dicho
mandamiento de condena, lo cual sería violatorio de derechos y garantías constitucionales,
además “este caso tendría un solo nombre tráfico de influencias” (sic).

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

La accionante alega la vulneración de los derechos a la libertad y al efecto cita los arts. 23 de la
Constitución Política del Estado (CPE); 7.3 y 8.2 de la Convención Americana Sobre Derechos
Humanos; y 14. 3 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

I.1.3. Petitorio

La accionante solicita se conceda la tutela demandada y se deje sin efecto el mandamiento de


condena, emitido el 28 de diciembre de 2011, ordenando la inmediata libertad de su
representado.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 10 de enero de 2012, según consta en el acta, cursante de fs. 25
a 26 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de la accionante, ratificó el contenido íntegro de la acción de libertad y amplía


indicando: a) Existe jurisprudencia que establece la no exigencia de agotamiento de recursos
para interponer la acción de libertad, conforme establece la “SC 1865/2004”; y b) Añade que al
existir un trámite previsto conforme al art. 314 del CPP sin embargo; el plazo de prescripción de
la pena solicitada, ya se cumplió el 2 de enero de 2012, empero al 10 del mes y año en curso no
existe resolución respectiva, hechos ilegales en los que incurrió la referida autoridad demandada.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Heiddy Zapata Montaño, Jueza Segunda del Tribunal de Sentencia no presentó informe escrito y
en audiencia indicó: 1) No se puede pretender realizar actos que recaen en la duplicidad de las

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 195


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

resoluciones, siendo que existe el medio jurisdiccional idóneo para poder resolverlos, y no es la
acción de libertad la vía para restituir el derecho a la libertad; 2) El mandamiento de condena se
emite en mérito a una sentencia condenatoria ejecutoriada, de manera que no se puede alegar
violación del derecho a la libertad, ni lesión al debido proceso; 3) Refiere también, que se
confunde los términos de ilegal e indebido por la emisión del mandamiento de condena, este es
emitido de forma legal ya que responde a una sentencia con calidad de cosa juzgada; 4)
Respecto a la solicitud de la extinción o prescripción de la pena, está en trámite y pendiente de
resolución; y 5) Pide se deniegue la solicitud de acción de libertad y finalmente aclara que el
mandamiento de condena es emitido conforme al art. 122 del CPP estando debidamente
ejecutado el mismo.

I.2.3. Intervención del Ministerio Público

En audiencia la representante del Ministerio Público manifestó: i) Conforme establece el art. 184
del CP, la Jueza tenía la obligación de hacer cumplir la condena al tener la sentencia
condenatoria ejecutoriada, por lo que su actuar es correcto, y ii) No se ha vulnerado ningún
derecho fundamental, menos aún el derecho a la libertad de José Alfonso Antezana Cornacchia.}

I.2.4. Resolución

Concluida la audiencia, José Pompilio Coca Sejas, Juez Cuarto de Sentencia del Tribunal
Departamental de Justicia de Cochabamba, constituido en Juez de garantías, pronunció
Resolución de 10 de enero de 2012, cursante de fs. 26 vta. a 29 vta., por la que denegó la tutela
en parte, dejando constancia de la existencia de resoluciones pendientes que tienen que ser
resueltas por la autoridad demandada, tomando en cuenta los plazos previstos en el art. 314 con
referencia al 315 del CPP, con los siguientes fundamentos: a) Las resoluciones pendientes en la
vía ordinaria deben ser agotadas porque conciernen en forma inmediata la libertad de las
personas; b) Existiendo sentencia condenatoria, la autoridad demandada está en la obligación
ineludible de hacer cumplir, sin perjuicio de que el representado de la accionante tiene ejercitado
el derecho que le asiste en resguardo a su libertad; c) Conforme refiere la accionante, la
prescripción de la pena se ha cumplido el 1 de agosto de 2010, sin embargo; este descuido o
negligencia no es atribuible a la administración de justicia, empero esta situación debe ser
resuelto por el juez ordinario que conoce la causa; y d) En el caso concreto la acción de libertad
no puede considerarse como un aspecto subsidiario, lo contrario como ya se fundamentó, sería
duplicidad de resoluciones en perjuicio de la unidad jurisdiccional como del accionante.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones,
que se señalan seguidamente:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por Freddy Zambrana Espinoza contra José Alfonso
Antezana Cornacchia, por los delitos de falsedad material e ideológica y otro, el referido
condenado mediante memorial sin fecha, plantea prescripción de la pena, por haber transcurrido
8 años, 4 meses y 23 días, por lo que pide al Tribunal que conoce la causa, dictar resolución
correspondiente a su favor. fs. 3 a 4 vta.

II.2. A fs. 5, cursa decreto de 27 de diciembre de 2011, emitido por el referido Tribunal de
Sentencia, señalando que la solicitud de la prescripción de la pena, “se ponga a conocimiento de
las partes”, para su tramite conforme al art. 314 del CPP.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 196


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.3. A fs. 8, existe el decreto correspondiente al referido memorial, en el que se dispone se


expida un nuevo mandamiento de condena contra José Alfonso Antezana Cornacchia, debiendo
ser ejecutado por el Director de dicho Centro Penitenciario.

II.4. A fs. 11 cursa mandamiento de condena, emitido por la Jueza Segunda del Tribunal de
Sentencia, ahora demandada.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, alega que la autoridad judicial demandada vulneró el derecho a la libertad de su


representado, por haber emitido mandamiento de condena el 28 de diciembre de 2011, dentro de
un fenecido proceso penal seguido en su contra, violando sus derechos y garantías
constitucionales, toda vez que ha incurrido en acto ilegal provocando así su indebida detención,
además señala que se tiene la solicitud de prescripción de la pena, misma que se encuentra en
trámite pendiente de resolución, advirtiéndose incumplimiento de plazos procesales. Por
consiguiente, corresponde analizar en revisión, si los hechos denunciados son evidentes y sí en
el caso concreto la demandada vulneró los derechos del representado de la accionante, con la
finalidad de conceder o no la tutela reconocida por este medio de defensa.

III.1. Alcance y finalidad de la acción de libertad

Conforme señala la Constitución Política del Estado, cuando toda persona considere que su vida
se encuentra en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o
privada de libertad personal, podrá interponer acción de libertad y acudir, de manera oral o
escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier
juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la
persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la
libertad (art. 125 CPE).

La Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH), instrumento que forma parte del
bloque de constitucionalidad, en su art. 3 determina: “Todo individuo tiene derecho a la vida, a
la libertad y a la seguridad de su persona”; y, el art. 8 de la misma DUDH establece: “Toda
persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la
ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o
por la ley”; criterio también recogido por el art. 25 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos.

Al respecto, la amplia jurisprudencia constitucional desarrollada ha señalado que: “(…) la


acción de libertad, antes recurso de hábeas corpus, tiene carácter excepcionalmente subsidiario
“...en los supuestos en que la norma procesal ordinaria de manera específica prevea medios de
defensa eficaces y oportunos para resguardar el derecho a la libertad supuestamente
lesionado…”, conforme lo ha entendido la SC 0160/2005-R de 23 de febrero; Sentencia que,
explicando los motivos de la subsidiariedad, señaló que el ordenamiento jurídico no “…puede
crear y activar recursos simultáneos o alternativos con el mismo fin sin provocar disfunciones
procesales no queridas por el orden constitucional…”.

Por lo señalado, la acción de libertad, procederá de forma directa, sólo si los medios legales
ordinarios no son los adecuados e idóneos para reparar de forma inmediata y eficaz el derecho a
la libertad ilegalmente restringido.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 197


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Precisando dicho entendimiento, la SC 0008/2010-R de 6 de abril, sobre la base de la


Constitución Política del Estado, estableció que la acción de libertad se configura “…como un
medio de defensa idóneo para la protección efectiva y real de derechos fundamentales
vinculados a la vida, libertad y procesamientos indebidos que hagan peligrar, supriman o
restrinjan estos derechos”; añadiendo, sin embargo, que “…en caso de existir norma expresa
que prevea mecanismos intra-procesales efectivos y oportunos de defensa de estos derechos
fundamentales, deben ser utilizados previamente antes de activarse la tutela constitucional,
aspecto que se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos y 25 de la Convención Americana de Derechos Humanos”.
Disposiciones normativas que forman parte del bloque de constitucionalidad, de conformidad a
lo dispuesto por el art. 410 de la CPE.

Bajo ese entendimiento, esta última Sentencia estableció sub reglas para determinar la existencia
de medios efectivos y oportunos de defensa de los derechos que se encuentran bajo la protección
del recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, conforme al siguiente sentido:

III.2. Sobre las lesiones al debido proceso y la acción de libertad

Asimismo el razonamiento de la SC 0480/2010-R de 5 de julio, dejó establecido que: “La


acción de libertad instituida en el art. 125 de la CPE, tiene la finalidad de proteger el derecho a
la vida y a la libertad física o personal cuando la persona creyere estar ilegalmente perseguida,
indebidamente procesada o privada de su libertad, o considere que su vida está en peligro”.

La jurisprudencia constitucional en relación al procesamiento indebido, estableció que: …la


protección que brinda el art. 18 de la Constitución Política en cuanto al debido proceso se
refiere, no abarca a todas las formas en que el mismo puede ser infringido, sino sólo a aquellos
supuestos en los que está directamente vinculado al derecho a la libertad personal o de
locomoción, por operar como causa para su restricción o supresión, quedando por tanto las
demás bajo la tutela que brinda el art. 19 constitucional, que a diferencia del Hábeas Corpus,
exige para su procedencia el agotamiento de otras vías o recursos idóneos para lograr la
reparación inmediata del acto o la omisión ilegal, (SC 0024/2001-R de 16 de enero).

Bajo esa óptica, la SC 1668/2004-R, de 14 de octubre, expresó que a través del recurso de
habeas corpus, ahora acción de libertad, no se pueden examinar: “…actos o decisiones del
recurrido que no estén vinculados a los derechos a la libertad física como a la libertad de
locomoción, como tampoco supuestas irregularidades que impliquen procesamiento indebido
que no hubieran sido reclamadas oportunamente ante la autoridad judicial competente, pues si
bien este recurso no es subsidiario, no puede ser utilizado para salvar la negligencia de la parte
recurrente”.

En consecuencia, de acuerdo a los razonamientos expresados por el Tribunal Constitucional., la


acción de libertad, no es el medio que brinda la protección a las infracciones de la garantía del
debido proceso, siendo los mismos órganos que conocen la causa, los llamados a reparar las
infracciones a la garantía señalada y una vez agotados los recursos en instancias ordinarias,
recién se podrá acudir a la justicia constitucional, correspondiendo dicha tutela a la acción de
amparo constitucional instituido en el art. 128 de la CPE.

En ese contexto desglosando la SC 1865/2004-R de 1 de diciembre, manifestó que: “las lesiones


al debido proceso están llamadas a ser reparadas por los mismos órganos jurisdiccionales que
conocen la causa, lo que implica que quien ha sido objeto de esa lesión, debe pedir la
reparación a los jueces y tribunales ordinarios, asumiendo activamente su rol dentro del

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 198


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

proceso, a través de los medios y recursos que prevé la ley, y sólo agotados éstos, se podrá
acudir ante la jurisdicción constitucional a través del recurso de amparo constitucional, que,
como se ha señalado, es el recurso idóneo para precautelar las lesiones a la garantía del
debido proceso; a no ser que se constate que a consecuencia de las violaciones al debido
proceso invocadas, se colocó al recurrente en absoluto estado de indefensión, lo que no le
permitió impugnar los supuestos actos ilegales y que recién tuvo conocimiento del proceso al
momento de la persecución o la privación de la libertad” (las negrillas nos corresponden).

III.3. Análisis del caso concreto

En el caso planteado, se evidencia la existencia de un proceso penal en ejecución de sentencia


seguido por Freddy Zambrana Espinoza contra José Alfonso Antezana Cornacchia, por los
delitos de falsedad material e ideológica y otro, en cuyo proceso se expidió y ejecutó el
mandamiento de condena contra el representado de la accionante, quien planteó la prescripción
de la pena, por considerar la procedencia de la misma; sin embargo, hasta la fecha no se ha dado
curso a su petición.

Al respecto, conforme a la jurisprudencia constitucional desarrollada líneas arriba, cuando una


persona considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es
indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer la acción de libertad y
acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde
tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se
restituya su derecho a la libertad.

A la vez, conforme a lo señalado precedentemente, las lesiones al debido proceso están llamadas
a ser reparadas por los mismos órganos jurisdiccionales que conocen la causa, lo que implica
quien ha sido objeto de esa lesión, debe pedir la reparación a los jueces y tribunales ordinarios,
asumiendo activamente su rol dentro del proceso, a través de los medios y recursos que prevé la
ley, y sólo agotados éstos, se podrá acudir ante la jurisdicción constitucional a través del recurso
de amparo constitucional, que, como se ha señalado, es el recurso idóneo para precautelar las
lesiones a la garantía del debido proceso; a no ser que se constate que a consecuencia de las
violaciones al debido proceso invocadas, se colocó al accionante en absoluto estado de
indefensión, lo que no le permitió impugnar los supuestos actos ilegales y que recién tuvo
conocimiento del proceso al momento de la persecución o la privación de la libertad.

En el presente caso, no es posible ingresar al análisis de fondo, toda vez que existen medios
legales de defensa por la jurisdicción ordinaria respecto al planteamiento de la prescripción de la
pena, conforme al art. 106 del Código Penal (CP) modificado por la Ley 1970.
Consecuentemente, corresponde que previamente se agoten los mecanismos ordinarios para el
restablecimiento del derecho a la libertad presuntamente infringido, en el entendido que la
presente garantía jurisdiccional se rige excepcionalmente por el principio de subsidiaridad.

En consecuencia el Juez de garantías, al denegar en parte la acción tutelar, no obro


correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, y art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 199


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

resuelve DENEGAR, en su totalidad la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingreso al


análisis de fondo.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0030/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00035-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 10/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 70 a 72 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Hugo Paz Lavadenz, contra Virginia Janeth
Crespo Ibañez y Ricardo Chumacero Tórrez, Presidenta y Vocal de la Sala Penal Primera
del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de enero de 2012, a horas 17:45, cursante de fs. 3 a 4 vta., el
accionante expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan acción

A consecuencia de una anterior acción de libertad favorable para el accionante, se anuló un


“Auto de Vista” por el que se resolvió el recurso de apelación que formuló contra la Resolución
de 13 de octubre de 2010, a través de la cual se dispuso su detención preventiva, dentro del
proceso penal seguido a instancias del Ministerio Público en su contra. Posteriormente,
solicitada la cesación de su detención preventiva, el Juez Noveno de Instrucción en lo Penal, el
11 de abril de 2011, resolvió rechazando su petitorio, fallo contra el que también opuso recurso
de apelación.

Ambos medios legales pasaron a conocimiento de la Sala Penal Primera, que en lugar de fijar un
solo acto procesal para resolver las apelaciones, señaló dos audiencias para las “3:20 y 3:30 de la
tarde” (sic), conculcando el principio de concentración.

A más de esta transgresión al debido proceso, el accionante afirma que recusó a la autoridad
codemandada -Virginia Janeth Crespo Ibañez-, por tener íntima relación con la parte querellante
en el proceso penal e instó que en un solo acto se resuelva la impugnación interpuesta contra la
Resolución de 11 de abril de 2011; sin embargo, la referida Vocal optó por continuar la
audiencia de apelación de medidas cautelares, con el único fin de restringirle su libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 200


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, estima lesionados sus derechos al juez natural, imparcial e independiente, al


debido proceso, a la “seguridad jurídica” e igualdad de las partes, a la libertad y a la dignidad,
citando únicamente el art. 22 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente” la acción, concediéndosele la tutela y además, se anulen las


resoluciones emergentes de las audiencias de 11 de enero de 2012.

I.2. Audiencia y resolución del Tribunal de garantías

Previo a señalarse la audiencia de consideración de la acción de libertad, de los actuados que


cursan de fs. 6 a 46, se advierte que sorteada la causa y pasada a conocimiento de la Sala Penal
Tercera, su Presidente -amparado en los arts. 48.3 y 6 y 49 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP)- formuló excusa que a efectos de ser resuelta, ameritó se convocara a su
similar de la Sala Penal Segunda; autoridad que del mismo modo y a través de la Resolución de
13 de enero de 2012 (fs. 30), también formuló excusa invocando las mismas causales que la
anterior, por lo que para resolverla se convocó a los Presidentes de la Sala Civil Primera y
Segunda.

Por representación de la misma fecha (fs. 34), el Oficial de Diligencias de la Sala Penal Tercera,
indicó que la Presidenta de la Sala Civil Primera se negó a ser notificada con el decreto de
convocatoria, indicando que según el registro correspondiente de la auxiliatura de Salas Civiles,
no era su turno para conocer la causa; extremo que fue comprobado, siendo el turno de
notificación al Presidente de su similar Segunda, respecto a quien tampoco pudo efectivizarse la
diligencia, puesto que alegó tener impedimento constitucional para tomar conocimiento de la
presente acción de libertad.

En consideración a la representación que antecede y por no haberse podido conformar quórum


para asumir conocimiento de la presente acción, Ángel Arias Morales, Vocal de la referida Sala
Penal Tercera, el mismo 13 de enero de 2012, dispuso la remisión de la presente acción de
libertad a demandas nuevas penales (fs. 35 a 36). De este modo, a tuición del Juzgado Sexto de
Sentencia en lo Penal, a través de la Resolución 006/2012 de 13 de enero y en cumplimiento de
la SC “203”/2006-R, su titular se pronunció respecto al procedimiento para la resolución de
excusas planteadas en la acción de libertad, que establece que antes de aprehender conocimiento
y resolver el caso, la sala llamada por ley deberá pronunciarse sobre la legalidad o ilegalidad de
la excusa y, en consecuencia, dispuso que por secretaría, en el día se proceda a la devolución de
antecedentes a la Sala Penal Tercera y se dé cumplimiento a este procedimiento; así, por nota
CITE 52/2012 de 13 de enero del mismo año, se devolvió obrados al Presidente y Vocal de la
Sala Penal Tercera.

Consecuencia de lo anterior, el referido Vocal de la Sala Penal Tercera, convocó a Félix Peralta
Peralta -Vocal de la Sala Civil Cuarta-, a efectos de conformar quórum y resolver las excusas
formuladas por los Presidentes de las Salas Penales Segunda y Tercera; en ese orden, por
Resolución 09/2012 de 16 de enero, en consideración de los antecedentes y normativa procesal
aplicable, la Sala Penal Tercera declaró legales las excusas planteadas por estas autoridades,
disponiendo su separación en la presente acción.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 201


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la relación que antecede y advertido que el trámite respecto a las excusas planteadas fueron
llevadas conforme a derecho, la Sala Penal Tercera se constituyó en Tribunal de garantías de la
presente acción de libertad, con la intervención de Ángel Arias Morales -Vocal de dicha Sala- y
Félix Peralta Peralta -Vocal de la Sala Civil Cuarta-, celebrándose la audiencia pública de
consideración de la acción, el 17 de enero de 2012, en presencia del abogado patrocinante de
Hugo Paz Lavadenz, la parte demandada y del representante del Ministerio Público; ausente el
accionante, según consta en el acta cursante de fs. 64 a 69, produciéndose los siguientes
actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante, previamente a ratificar el tenor íntegro de la acción de libertad


interpuesta, indicó que su defendido se encuentra cumpliendo detención domiciliaria en la
ciudad de Santa Cruz, razón por la que no pudo asistir a la audiencia; posteriormente, afirmó: a)
A través de la Resolución 558/2010 de 13 de octubre, pronunciada por el Juez Noveno de
Instrucción en lo Penal, se dispuso la detención preventiva de Hugo Paz Lavadenz, no obstante
que la autoridad fiscal solicitó únicamente aplicación de medidas sustitutivas; b) En dos
acciones de libertad anteriores, el impetrante denunció este acto ilegal y además la dilación
procesal en la sustanciación de su solicitud de cesación de la detención preventiva, última que
mereció la concesión de la tutela en mérito al principio de celeridad procesal; c) Insistiendo en
los argumentos que sustentaron las dos acciones antes referidas, continuó afirmando que la
presente versa sobre la impugnación contra la Resolución de 11 de enero de 2012, pronunciada
por las autoridades demandas, por la que se ratificó la “resolución de imputación” 558/2010, a
pesar que su parte intelectiva y de fundamentación omite hacer referencia a los riesgos
procesales insertos en el art. 233.1 y 2 del Código de Procedimiento Penal (CPP); y, d) Reitera
como acto lesivo, el hecho que no se hubieran tramitado las dos apelaciones conjuntamente en
una sola audiencia en virtud a los principios de concentración, de unidad y de economía
procesal; sumándose a ello, que formulada una recusación contra la vocal demandada, esta
autoridad se limitó a rechazarla in límine, continuando con la celebración de dicha audiencia a
pesar que su competencia se encontraba suspendida entre tanto el tribunal superior se pronuncie
respecto a la recusación intentada.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los miembros de la Sala Penal Primera, a través del informe escrito que cursa de fs. 61 a 63 y en
audiencia, manifestaron lo siguiente: 1) El procesado interpuso recusación contra la vocal
demandada, amparado en los incs. 5) y 11) de art. 316 del CPP, más -por no incurrir en estas
causales- la recusada no se allanó; al respecto, en virtud al art. 321 segunda parte del mismo
Código corresponde el rechazo in límine de esta solicitud, disposición legal modificada por la
Ley 007 de 18 de mayo de 2010, además, conforme a la SC 1384/2004-R, se establece la
oportunidad y forma de presentar la recusación; 2) En aplicación de la normativa procesal y de
la jurisprudencia constitucional, se corroboró que el Juez a quo, no vulneró ninguna garantía ni
derecho del procesado; 3) Se determinó la admisibilidad del recurso por haber sido interpuesto
dentro del término de ley, declarando su improcedencia y confirmando la Resolución 558/2010,
misma que no causa estado; 4) Al señalar horas diferentes en la misma fecha de audiencias para
la Resolución de las apelaciones presentadas por el accionante, no se vulnera el principio de
concentración; 5) En estricto cumplimiento a las normas que rigen la materia y lo estipulado en
los arts. 250 y 124 del CPP, no se dispuso la detención preventiva, ni la detención domiciliaria
del accionante, por lo que no existe una detención indebida; y, 6) En el caso de autos, no se
conculcaron ni limitaron garantías constitucionales, correspondiendo denegar la tutela solicitada
y sea con costas.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 202


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, fungiendo como
Tribunal de garantías, dictó la Resolución 10/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 70 a 72 vta.,
por la que denegó la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: i) Respecto al
procesamiento indebido, conforme a la SC 0619/2005-R de 7 de junio, debían concurrir dos
requisitos indispensables; por un lado, que existan actos lesivos y por otro, absoluto estado de
indefensión. En el caso de autos, el accionante no acreditó estos extremos, ni que exista
detención ilegal o indebida de parte de las autoridades demandadas; ii) Los argumentos
expuestos en el memorial y en la audiencia de la acción de libertad, resultan confusos y
contradictorios, más aún cuando se solicitó la nulidad de las resoluciones emergentes de las
audiencias de apelaciones de 11 de enero de 2012, sin consignar números y a cuál de ellas
corresponden; iii) El art. 125 de la CPE, determina la viabilidad de la acción de libertad cuando
se vulnera el debido proceso, siempre y cuando este principio se halle en estricta relación y
vinculado al valor supremo de la libertad, circunstancia que el accionante no acreditó; iv) El
rechazo de la recusación planteada contra la autoridad codemandada, no la inhabilita para
conocer el fondo y resolver la apelación de medida la cautelar; y, v) La “SC 745/2010”,
establece que el alcance de la acción de libertad, no comprende todas las violaciones al debido
proceso, sino a aquellas que afecten exclusivamente a la libertad.

En vía de la complementación y enmienda, la codemandada, Virginia Janeth Crespo Ibáñez,


solicitó se aclare que la recusación planteada por Hugo Paz Lavandez dentro del proceso penal
en cuestión, “ha sido declarada in límine” (sic); así, el Presidente del la Tribunal de garantías
corroboró esta situación, afirmando que: complementó la Resolución dictada cuyo detalle
antecede, indicando que: “se deja establecido que los términos de dicho rechazo son en ese
sentido, lo que le permitió conocer en la misma audiencia el trámite de apelación incidental de
medida cautelar”.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público y el Ministerio de Gobierno
contra Hugo Paz Lavadenz, por la supuesta comisión del delito de terrorismo y otros, instalada
la audiencia de 11 de enero de 2012, el ahora accionante, interpuso recusación contra Virginia
Janeth Crespo Ibáñez, Presidenta de la Sala Penal Primera, haciendo referencia en los incs. 5 y
11 del art. 316 del CPP, autoridad que manifestó no incurrir en los mismos y rechazó in límine
dicho planteamiento en base a la modificación de la Ley 007, prosiguiéndose con la audiencia
(memorial de fs. 53 a 57; informe de los autoridades demandas, fs. 61 a 63).

II.2. Conforme lo señalado en el informe de los miembros demandados de la Sala Penal Primera
y ratificado por el abogado del accionante en audiencia, Hugo Paz Lavadenz se encuentra con
detención domiciliaria en la ciudad de Santa Cruz (fs. 61 a 63; 64)

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, considera vulnerados sus derechos al juez natural, imparcial e independiente, al


debido proceso, a la “seguridad jurídica”, a la igualdad de las partes, a la libertad y a la igualdad,
alegando que las autoridades demandadas dispusieron la realización de dos audiencias
consecutivas en la misma fecha, respecto a los recursos de apelación que interpuso, no obstante

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 203


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que correspondían resolverse en un solo acto procesal; sumándose que, a pesar de haber
presentado recusación contra la Presidenta de la Sala Penal Primera, en base a una causal
sobreviniente, la misma instaló la audiencia y continuó con los actos hasta pronunciar
Resolución sin la debida fundamentación, con el único fin de ratificar la aplicación de su
detención preventiva dispuesta por el Juez a quo. En consecuencia, corresponde en revisión,
verificar si tales extremos son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza Jurídica de la acción de libertad

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


libertad, precisando: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad” (art. 125 de la CPE).

En consecuencia, tomando en cuenta el contenido de los Tratados y Convenios Internacionales


que conforman el bloque de constitucionalidad, las características esenciales hacen que esta
acción se constituya en un mecanismo breve y sumario destinado a resguardar el derecho a vida,
a la libertad física o personal y el derecho a la libertad de locomoción en los supuestos anotados
precedentemente.

III.2. Alcances de la tutela, cuando se denuncian lesiones al debido proceso a través de la


acción de libertad

Al efecto, la SC 0538/2011-R de 29 de abril, señaló que: “A través de la jurisprudencia


constitucional, se limitaron los presupuestos de activación de esta acción tutelar, cuando la
parte accionante aduce que su derecho a la libertad fue conculcada a consecuencia de un
procesamiento indebido o de una persecución ilegal, siempre que se establezca el vínculo
directo que adscriba las decisiones, actos u omisiones asumidas por el demandado, con la
restricción alegada. Es así que, tampoco puede invocarse sobre la base de presuntas
irregularidades, susceptibles de objeción oportuna por el agraviado ante la autoridad judicial
competente y por tanto, no se justifica que acuda a la instancia constitucional para salvar su
negligencia. 'En síntesis, la acción de libertad sólo es procedente cuando el acto lesivo se
encuentra estrechamente vinculado con el derecho a la libertad, como causa directa; es decir,
con su restricción, supresión o amenaza de estas lesiones y en el supuesto de evidenciarse
absoluto estado de indefensión; caso contrario, la parte accionante deberá acudir a la instancia
pertinente cuando se alegue vulneración al debido proceso' (SC 1030/2010-R de 23 de agosto).

Bajo este entendimiento, queda claro que a consecuencia de la lesión invocada, corresponde -
a la parte accionante- demostrar que fue puesta en un evidente estado de indefensión
absoluto, privada de impugnar los actos lesivos dentro del proceso y que recién tuvo
conocimiento del mismo a momento de la persecución o privación de libertad; en razón que la
tutela otorgada por la jurisdicción constitucional a través de esta acción, requiere de certeza
al respecto, para abrir su competencia e ingresar al análisis de fondo de lo denunciado” (las
negrillas fueron añadidas).

III.3. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 204


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión de la problemática planteada, se tiene que Hugo Paz Lavadenz denuncia a través
de esta acción, que las autoridades demandadas vulneraron sus derechos al juez natural,
imparcial e independiente y al debido proceso, por cuanto el 11 de enero de 2012, se señalaron
dos audiencias respecto a las apelaciones interpuestas por el accionante dentro del proceso penal
seguido en su contra, por el supuesto delito de terrorismo y otros, vulnerando de esta manera el
principio de concentración procesal.

De igual manera refiere que, en base a una causal sobreviniente formuló recusación de la
Presidenta de la Sala Penal Primera -quien era la autoridad que debía conocer junto a otro Vocal,
en apelación la Resolución que dispuso su detención preventiva-; sin embargo, la Juzgadora
rechazó in límine la recusación y en aplicación del art. 321 del CPP, modificado por la Ley 007
de 18 de mayo de 2010, celebró la audiencia y dictó Resolución.
Conforme lo relacionado precedentemente, lo aseverado tanto por las autoridades demandadas
así como por el mismo accionante; lo que se pretende a través de la presente acción, es que se
dejen sin efecto las Resoluciones emitidas por la Sala Penal Primera; por cuanto, a criterio del
accionante, se habría desconocido el principio de concentración procesal, al no haber tramitado
las dos apelaciones interpuestas en una misma audiencia. En ese orden, si bien no se cuenta con
los datos del proceso, se puede inferir de lo aseverado por los demandados, que solamente fue
tramitada una apelación, estando pendiente la segunda, por lo cual el accionante estaría todavía
gozando del beneficio de medida sustitutiva a la detención preventiva referida a la detención
domiciliaria en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.

Consiguientemente, se evidencia que los supuestos actos ilegales están relacionados a lesiones al
debido proceso, mismos que no pueden ser dilucidados a través de la presente acción, por cuanto
no se ha demostrado por una parte, que dichas lesiones estén relacionadas con el derecho a la
libertad personal o de locomoción, así como que exista absoluto estado de indefensión; criterios
exigidos a efecto de poder ingresar al análisis de la causa y que en el presente caso no ha
ocurrido, conforme a la jurisprudencia constitucional de referencia.

Por otro lado, respecto a la supuesta lesión a los derechos al juez natural, imparcial e
independiente, así como a la “seguridad jurídica” y a la igualdad de las partes, cabe referir que
dicho aspecto corresponde a supuestas lesiones al debido proceso que bien pudieron ser
corregidas mediante otra acción de defensa, al haberse igualmente establecido que no son la
causa directa de la presunta vulneración al derecho a la libertad del accionante. Conforme lo
relacionado y al no haberse demostrado lesión al derecho a la libertad individual, corresponde
denegar la tutela; más aún, si de acuerdo al art. 250 del CPP, la Resolución que dispuso una
medida cautelar es susceptible de modificación, debiendo para tal efecto la parte cumplir con las
exigencias previstas en el procedimiento penal, lo que en el caso presente no ocurrió, por lo que
los Vocales ahora demandados, cumplieron las normas que rigen la materia.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al haber denegado la acción tutelar, han actuado


correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud a la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 205


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0031/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Dr. Efren Choque Capuma
Acción de libertad:
Expediente: 00032-2012-02-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 003/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 86 a 89, pronunciada, dentro


de la acción de libertad, presentada por Saúl Díaz Méndez y Joselito Sabene Justiniano
contra Einar Hurtado Plaire, Ex Fiscal de Materia, Diego Roca Saucedo, Juez Segundo de
Instrucción en lo Penal, Germán Miranda Guerrero y Ponciano Ruiz Quispe, Presidente y
Vocal de la Sala Penal, respectivamente, todos del Tribunal Departamental de Justicia de
Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Los accionantes, por memorial presentado el 6 de enero de 2012, cursante de fs. 51 a 53,
manifestaron que:

I.1.1. Hechos que la motivan

Dentro del proceso penal seguido en contra de Dionel Novoa, por la presunta comisión del delito
de robo agravado, en merito a una declaración de un delincuente reincidente, el 2 de septiembre
de 2011, sin cumplir los requisitos de forma y material como es la falta de fundamentación en la
imputación, el Fiscal demandado presentó ampliación de la imputación formal en su contra y de
Beimar Cuellar, requiriendo aplicar la medida cautelar de carácter personal de detención
preventiva, y sin valorar los defectos de la imputación ni la incrédula declaración de un testigo
adicto a las drogas y reincidente, el Juez Segundo de Instrucción en lo Penal, ahora demandado,
mediante Auto Interlocutorio 175/2011 de 3 de septiembre, dispuso su detención preventiva en
la cárcel pública de Villa Busch.

Con el fin de lograr su libertad mediante el aporte de nuevos elementos de prueba, el 28 de


septiembre de 2011, solicitaron la cesación de la detención preventiva, mediante las resoluciones
Auto Interlocutorio 227/2011 y 228/2011 ambas de 14 de octubre, con las mismas palabras y en
un mismo formato, el Juez Segundo de Instrucción en lo Penal, rechazó las ambas solicitudes sin
la debida fundamentación, Resoluciones que de manera paradójica dan la razón sobre la
inexistencia de elementos de su participación, rechazando la cesación de detención preventiva
presentada.

Tomando en cuenta la carencia de fundamentos en ambas Resoluciones, fueron apelados y


resueltos mediante Auto de 28 de octubre de 2011, por el cual los Vocales demandados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 206


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

confirmaron las mismas, resoluciones apeladas, sin la debida fundamentación, lesionando el


debido proceso y por ende su derecho a la libertad.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Se señaló como vulnerados los derechos a la libertad y al debido proceso, citando al efecto los
arts. 23 y 115.II de la Constitución Política del Estado (CPE)

I.1.3. Petitorio

Solicitaron los accionantes se ordene al Juez Primero de Instrucción en lo Penal, la restitución de


su derecho a la libertad llana y simple.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 12 de enero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 85 y
vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la demanda

El abogado accionante, ratificó íntegramente los términos de la acción tutelar presentada.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Diego Roca Saucedo, Juez Segundo de Instrucción en lo Penal, mediante informe emitido en
audiencia, indicó que cuando se dictó la resolución de primera instancia, y se aplicó la detención
preventiva, los imputados, no hicieron uso de su derecho a recurrir de apelación; por otro lado,
en esta instancia, no es posible revisar la prueba aportada, ya que no es una instancia de
casación.

Ponciano Ruiz Quispe, Vocal de la Sala Penal, mediante informe escrito de 12 de enero de 2012,
leído en audiencia, cursante a fs. 68, manifestó que, una vez llegó el recurso de apelación, tal
cual señala el art. 251 del Código de Procedimiento Penal (CPP), en audiencia pública se
procedió al análisis de los datos del proceso, los fundamentos expuestos por las partes, los
peligros procesales -que aún persisten-, y posteriormente se dictó Resolución confirmando el
Auto apelado y determinando la continuidad de la detención preventiva, con los debidos
fundamentos fácticos y jurídicos.

Asimismo señalo que, últimamente los litigantes al agotar los medios que la ley prevé sin
obtener resultados positivos, vienen planteando acciones de amparo constitucional y de libertad
de forma abusiva, desnaturalizando la verdadera esencia de las acciones.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Pando,


mediante Resolución 003/2012, denegó la tutela de acción de libertad, con el fundamento que
los accionantes, una vez se dispuso la detención preventiva, debieron hacer uso del recurso de
apelación para corregir las arbitrariedades cometidos en dicha fase; al no haberlo hecho, y
demandar la presente acción al Juez Segundo de Instrucción en lo Penal.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 207


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por otro lado, si la solicitud de cesación de la detención preventiva fue denegada por el Juez
Primero de Instrucción en lo Penal, y la apelación confirmada por los Vocales demandados, la
presente acción debió ser planteada ineludiblemente contra el Juez antes señalado, ya que fue
esta la autoridad que rechazó su pedido, motivo por el que se impide ingresar al análisis de
fondo de los hechos denunciados.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional

La presente acción de amparo constitucional fue recibida el 26 de enero de 2012, sorteándose el


15 de febrero del mismo año, por lo que la presente Resolución se pronuncia dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes arrimados al expediente, se llega a las
siguientes conclusiones:

II.1. De fs. 11 a 12, cursa la ampliación de la imputación de 2 de septiembre de 2011, mediante


la que se imputó a los ahora accionantes por la supuesta comisión del delito de robo agravado,
una vez llevada a cabo la audiencia de medidas cautelares, por Auto 175/2011 (fs. 16 a 18), se
determinó la detención preventiva de los imputados.

II.2. De fs. 32 a 33, cursa el memorial de 1 de octubre de 2011, mediante el cual los imputados,
Beimar Cuellar García y Joselito Sabene Justiniano, solicitaron la cesación de la detención
preventiva; del mismo modo, de fs. 35 a 36, cursa memorial de 20 de septiembre de 2011,
donde, el imputado Saúl Días Méndez, impetró la cesación de la detención preventiva; tomando
en cuenta ambas solicitudes, el Juez Primero de Instrucción en lo Penal, resolvió los mismos,
rechazándolos, mediante los autos 227/2011 y 228/2011 (fs. 38 a 41).

II.3. A fs. 42, cursa el recurso de apelación de 18 de octubre de 2011 presentado por los tres
imputados, que fue resuelto mediante Auto de 28 de octubre de 2011, dictado por la Sala Penal y
Administrativa, confirmando los autos apelados (fs.48 a 49).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes manifestaron que las autoridades demandadas lesionaron sus derechos a la
libertad y al debido proceso, puesto que: a) Fueron detenidos preventivamente sin tomar en
cuenta los defectos de forma y contenido de la ampliación de la imputación, que fue sustentada
en la declaración testifical de un delincuente reincidente que goza de poca credibilidad: b) Ante
su detención preventiva, solicitaron en dos memoriales la cesación de la detención preventiva,
que fueron rechazados sin fundamentos legales convincentes, en el mismo formato tanto de
fondo como de forma, motivo por el que recurrieron de apelación contra ambos Autos
infundados, que una vez resueltos por el Tribunal de Alzada, confirmaron ambos Autos,
manteniendo la carencia de fundamentos jurídicos. Correspondiendo analizar en revisión, si tales
argumentos son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos al derecho a la libertad de los
accionantes, a fin de otorgar o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y ámbito de protección de la acción de libertad

De acuerdo a la Jurisprudencia Constitucional, establecida en las SSCC 0040/2011-R de 7 de


febrero, 0100/2011-R de 21 de febrero, entre otras manifestó que: “…La garantía jurisdiccional
del habeas corpus fue consagrada por el art. 18 de la CPEabrg, actualmente, la Constitución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 208


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Política del Estado vigente también la contempla pero con la denominación de acción de
libertad arts. 125 al 127 de la (CPE); sin embargo, no se trata de un simple cambio de
nomenclatura, sino de una precisión conceptual, pues conforme a la teoría del Derecho
Procesal Constitucional, sustituir la denominación de “recurso”, por la de “acción” -además
de adecuar la legislación boliviana a la evolución de la doctrina de la materia- implica
reconocer a esta garantía como “la facultad de demandar la protección de un derecho ante los
órganos jurisdiccionales” o sea “poner en marcha el aparato del Estado para la protección de
un derecho conculcado”, en contraposición a la denominación de “recurso” que implicaba
considerarla como la simple impugnación o reclamación que, concedida por ley, efectúa quien
se considera perjudicado o agraviado por la providencia de un juez o tribunal para que el
superior la reforme o revoque y que por ello supone la existencia previa de un litigio (García
Belaunde, Domingo. “El hábeas corpus en el Perú”. Universidad Mayor de San Marcos, 1979,
p. 108).

La precisión conceptual que implica el cambio de denominación, también conlleva que,


englobando el ámbito de protección y las características esenciales del hábeas corpus, la
acción de libertad adquiera una nueva dimensión; en ese sentido, se constituye en una garantía
jurisdiccional esencial, pues su ámbito de protección ahora incorpora al derecho a la vida -
bien jurídico primario y fuente de los demás derechos del ser humano- junto a la clásica
protección al derecho a la libertad física o personal, la garantía del debido proceso en los
supuestos en que exista vinculación directa con el derecho a la libertad física y absoluto estado
de indefensión (SC 1865/2004) y el derecho a la libertad de locomoción, cuando exista
vinculación de este derecho con la libertad física o personal, el derecho a la vida o a la salud
(SC 0023/2010-R).

Asimismo, la Constitución vigente mantiene las características esenciales del hábeas corpus: El
informalismo, por la ausencia de requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por la
urgencia en la protección de los derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite
caracterizado por su celeridad; la generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio,
inmunidad o prerrogativa, y la inmediación, porque se requiere que la autoridad judicial tenga
contacto con la persona privada de libertad.

Es importante resaltar que la Constitución Política del Estado vigente, en el marco más amplio
que implica la concepción de “acción de libertad” y acorde al principio de progresividad,
acentúa algunas de las características anotadas; así por ejemplo, en el caso del informalismo,
contempla la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, antes reservada sólo a
los supuestos en que la persona fuera menor de edad, incapacitada, analfabeta o notoriamente
pobre; en el caso de la inmediación, además de establecer que la autoridad judicial dispondrá
que el accionante sea conducido a su presencia, prevé la posibilidad de que ésta acuda al lugar
de detención; asimismo, como ya se ha referido, amplía el ámbito de protección, pues la ahora
acción de libertad no se limita a la protección de ese derecho, sino que alcanza al derecho a la
vida, además de la posibilidad de presentarla también contra particulares (art. 126 CPE).

De este modo, la jurisprudencia desarrollada por este Tribunal para el hábeas corpus, en tanto
y en cuanto no se contraponga a la Constitución Política del Estado es plenamente aplicable a
la acción de libertad…”.

III.2. Sobre las lesiones al debido proceso y la acción de libertad

El razonamiento de la SC 0480/2010-R de 5 de julio, dejó establecido que: La acción de libertad


instituida en el art. 125 de la CPE, tiene la finalidad de proteger el derecho a la vida y a la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 209


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

libertad física o personal cuando la persona creyere estar ilegalmente perseguida,


indebidamente procesada o privada de su libertad, o considere que su vida está en peligro.

En ese sentido, la jurisprudencia constitucional en relación al procesamiento indebido,


estableció que: "…la protección que brinda el art. 18 de la Constitución Política en cuanto al
debido proceso se refiere, no abarca a todas las formas en que el mismo puede ser infringido,
sino sólo a aquellos supuestos en los que está directamente vinculado al derecho a la libertad
personal o de locomoción, por operar como causa para su restricción o supresión, quedando
por tanto las demás bajo la tutela que brinda el art. 19 constitucional, que a diferencia del
Hábeas Corpus, exige para su procedencia el agotamiento de otras vías o recursos idóneos
para lograr la reparación inmediata del acto o la omisión ilegal" (SC 0024/2001-R de 16 de
enero).

Bajo esa óptica, la SC 1668/2004-R, de 14 de octubre, expresó que a través del recurso de
habeas corpus, ahora acción de libertad, no se pueden examinar "…actos o decisiones del
recurrido que no estén vinculados a los derechos a la libertad física como a la libertad de
locomoción, como tampoco supuestas irregularidades que impliquen procesamiento indebido
que no hubieran sido reclamadas oportunamente ante la autoridad judicial competente, pues si
bien este recurso no es subsidiario, no puede ser utilizado para salvar la negligencia de la parte
recurrente".

En consecuencia, de acuerdo a lo manifestado por la jurisprudencia emitida por este Tribunal,


el recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, no es el medio que brinda la protección
a las infracciones de la garantía del debido proceso, siendo los mismos órganos que conocen la
causa, los llamados a reparar las infracciones a la garantía señalada y una vez agotados los
recursos e instancias ordinarias, recién se podrá acudir a la justicia constitucional,
correspondiendo dicha tutela a la acción de amparo constitucional instituido en el art. 128 de la
CPE.

En ese sentido, la SC 1865/2004-R de 1 de diciembre, manifestó que: “las lesiones al debido


proceso están llamadas a ser reparadas por los mismos órganos jurisdiccionales que conocen
la causa, lo que implica que quien ha sido objeto de esa lesión, debe pedir la reparación a los
jueces y tribunales ordinarios, asumiendo activamente su rol dentro del proceso, a través de los
medios y recursos que prevé la ley, y sólo agotados éstos, se podrá acudir ante la jurisdicción
constitucional a través del recurso de amparo constitucional, que, como se ha señalado, es el
recurso idóneo para precautelar las lesiones a la garantía del debido proceso; a no ser que se
constate que a consecuencia de las violaciones al debido proceso invocadas, se colocó al
recurrente en absoluto estado de indefensión, lo que no le permitió impugnar los supuestos
actos ilegales y que recién tuvo conocimiento del proceso al momento de la persecución o la
privación de la libertad”.

Por otro lado, la SC 0619/2005-R de 7 de junio, en referencia a lesiones del debido proceso,
expresó que: “…a partir de la doctrina constitucional sentada en la SC 1865/2004-R de 1 de
diciembre, para que la garantía de la libertad personal o de locomoción pueda ejercerse
mediante el recurso de hábeas corpus cuando se denuncia procesamiento ilegal o indebido
deben presentarse, en forma concurrente, los siguientes presupuestos: a) el acto lesivo,
entendido como los actos ilegales, las omisiones indebidas o las amenazas de la autoridad
pública, denunciados, deben estar vinculados con la libertad por operar como causa directa
para su restricción o supresión; b) debe existir absoluto estado de indefensión, es decir, que el
recurrente no tuvo la oportunidad de impugnar los supuestos actos lesivos dentro del proceso

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 210


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

y que recién tuvo conocimiento del mismo al momento de la persecución o la privación de la


libertad” (se añadieron negrillas).

III.3. De la valoración de la prueba y la interpretación de la legalidad ordinaria en cuanto


a la acción de libertad

A través de la jurisprudencia constitucional, se ha establecido ciertos límites respecto al recurso


de hábeas corpus ahora acción de libertad, dentro de los que se encuentra la valoración de la
prueba realizada por la justicia ordinaria, razonamiento que de acuerdo a la SC 1085/2005-R de
12 de septiembre, se indicó que: “…La recurrente estima como acto ilegal restrictivo de los
derechos invocados, entre los cuales está el derecho a la libertad, la revocatoria que en
apelación dispusieron los vocales demandados de la cesación de la detención preventiva a favor
de su representado, decisión que conforme se evidencia de los antecedentes que cursan en
obrados, fue motivada fundamentalmente en la valoración de los elementos probatorios
aportados por las partes, valoración que conforme a lo sostenido por el art. 173 del CPP
corresponde al juez o tribunal en base a las reglas de la sana crítica, por lo que al respecto
resulta pertinente remitirse a lo señalado por la jurisprudencia de este Tribunal en la SC
0162/2000-R, de 25 de febrero, en la que refiriéndose al hábeas corpus se expresó que este
recurso (...) no puede ser utilizado para revisar resoluciones dictadas por autoridades
judiciales en pleno y legal ejercicio de sus atribuciones jurisdiccionales y menos para
establecer si efectuaron una correcta valoración de las pruebas destinadas a determinar la
existencia o no de materia justiciable (...). Asimismo, dicha jurisprudencia señala en la SC
0873/2004-R, de 8 de junio, determinó que: 'la compulsa de las pruebas que se aporten con el
fin de obtener la cesación de la detención preventiva, es facultad exclusiva del Juez Cautelar
que esté a cargo del control de la investigación, pues en los únicos casos que este Tribunal
puede intervenir en la revisión de dicho análisis será cuando el juzgador se hubiera apartado
de las previsiones legales que rigen el acto procesal como de los marcos de razonabilidad y
equidad previsibles para decidir, si estos casos no se dan, esta jurisdicción no puede intervenir
para dejar sin efecto la resolución que conceda la cesación o la rechace, ya que ello
importaría una doble valoración de la prueba'. Finalmente, en la SC 0651/2005-R, de 14 de
junio se estableció que: '(...) los vocales recurridos al dictar el Auto de Vista 37/2004, han
obrado conforme a sus facultades jurisdiccionales valorando la prueba aportada por el actor,
toda vez que la misma debe cumplir con los requisitos de forma y contenido, más aún cuando
por determinación del art. 250 del CPP, el Auto que imponga una medida cautelar o la rechace
es revocable o modificable, aún de oficio, es decir no causa estado, el recurrente puede volver a
solicitar la cesación de su detención preventiva cuando nuevos elementos de juicio demuestren
que no concurren los motivos que la fundaron o tornen conveniente que sea sustituida por otra
medida como señala el art. 239.1 del CPP' ” . (Las negrillas fueron añadidas).

En el mismo sentido, la jurisprudencia del Tribunal Constitucional mediante la SC 0083/2010-R


de 4 de mayo, ha manifestado que no es posible analizar la interpretación de la legalidad
efectuada por jueces y tribunales ordinarios, conforme establecieron las SSCC 1846/2004-R y
1917/2004-R: “Si bien la interpretación de la legalidad ordinaria debe ser labor de la
jurisdicción común, corresponde a la justicia constitucional verificar si en esa labor
interpretativa no se han quebrantado los principios constitucionales informadores del
ordenamiento jurídico, entre ellos, los de legalidad, seguridad jurídica, igualdad,
proporcionalidad, jerarquía normativa y debido proceso; principios a los que se hallan
vinculados todos los operadores jurídicos de la nación; dado que compete a la jurisdicción
constitucional otorgar la protección requerida, a través de las acciones de tutela establecidas
en los arts. 18 y 19 de la Constitución, ante violaciones a los derechos y garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 211


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

constitucionales, ocasionadas por una interpretación que tenga su origen en la jurisdicción


ordinaria, que vulnere principios y valores constitucionales”. (Las negrillas fueron añadidas).

En ese entendido, si la justicia constitucional está facultada a analizar la interpretación de la


legalidad ordinaria; empero, no podemos obviar tal como señaló la SC 0083/2010-R de 4 de
mayo, “si bien a la jurisdicción constitucional le corresponde verificar si en esa labor
interpretativa no se han quebrantado los principios constitucionales informadores del
ordenamiento jurídico, entre ellos, los de legalidad, seguridad jurídica, igualdad,
proporcionalidad, jerarquía normativa y debido proceso; no es menos cierto que el demandante
o accionante debe invocar y fundamentar cuáles fueron las infracciones a las reglas de la
interpretación admitidas por el derecho; situación que tampoco acontece en el presente caso,
pues no ha expresado con precisión las razones que sustentan su posición, ni identificó con
claridad qué criterios o principios interpretativos no fueron empleados o fueron desconocidos
por las autoridades judiciales demandadas”.

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso de autos, de acuerdo a los antecedentes y a la jurisprudencia constitucional citada, no


es posible ingresar al análisis de fondo de la presente acción, toda vez que las lesiones al debido
proceso denunciadas por los accionantes, respecto a los defectos de forma y contenido de la
aplicación de la imputación, deben ser reparadas por los jueces ordinarios y sólo agotadas las
instancias que la justicia ordinaria prevé, podrán activar la justicia constitucional, salvo que de
los antecedentes del caso, se determine la concurrencia de los requisitos establecidos por la SC
0619/2005-R de 7 de junio, que hacen posible analizar y tutelar las lesiones al debido proceso,
que exigen que el acto u omisión ilegal o amenaza de la autoridad pública, estén vinculados
directamente con el derecho a la libertad y hayan ocasionado su restricción o supresión;
además que el accionante se haya encontrado en estado absoluto de indefensión.

por otro lado, todas las lesiones a la mala valoración de la prueba, a la incorrecta aplicación legal
que originó su detención preventiva, debieron necesariamente ser denunciadas dentro del
recurso de apelación pues como manifestaron los propios accionantes, el inicio de las lesiones a
sus derechos y garantías constitucionales, se origina en el Auto que determinó su detención; en
tal sentido, no es posible a través de esta acción, realizar una nueva valoración de la prueba ni de
la interpretación de la legalidad ordinaria, pues estas constituyen parte de las autorestricciones
que la justicia constitucional ha establecido en la abundante jurisprudencia.

Sin embargo, por los antecedentes del caso de autos, los accionantes no invocaron ni
fundamentaron cuáles fueron las infracciones a las reglas de la interpretación admitidas
por el derecho; pues tampoco expresaron con precisión las razones que sustentan su
posición, ni identificaron con claridad qué criterios o principios interpretativos no fueron
empleados o fueron desconocidos por las autoridades judiciales demandadas; en ese
sentido, no cumplieron con los requisitos jurisprudenciales, que permiten verificar si en la
labor interpretativa y valorativa se han quebrantado los principios constitucionales
informadores del ordenamiento jurídico, pretendiendo en el caso concreto, que éste Tribunal
actué como una instancia más de la justicia ordinaria, realizando una nueva valoración de la
prueba y de la legalidad ordinaria de la Resolución que determinó su detención preventiva y de
las que denegaron la cesación de la detención preventiva que solicitaron.

En tal sentido, se concluye que el Juez de Sentencia, al denegar la tutela de la acción de


libertad, aunque con otros fundamentos, ha evaluado correctamente los datos del proceso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 212


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, de conformidad con el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional en
revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0032/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Dr. Efren Choque Capuma
Acción de libertad
Expediente: 00059-2012-02-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 4 de 20 de enero de 2012, cursante de fs. 301 a fs. 303, pronunciada
dentro de la acción de libertad interpuesta por Gladis Cárdenas Azad contra Ponciano Ruiz
Quispe, Germán Apolinar Miranda Guerrero, Vocales Sala Penal y Administrativa; Lucas
René Zambrana, Juez Primero de Instrucción en lo Penal, todos del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando y. Maria Jaqueline Bascope Gonzales Fiscal de
Sustancias Controladas.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 18 de enero de 2012, a horas 11:30, cursante de fs. 3 a 6, la


accionante expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En el proceso penal seguido en su contra por el Ministerio Público, por la presunta comisión del
delito de tráfico de sustancias controladas, la accionante prestó su declaración informativa e
inmediatamente fue aprehendida, por orden de la Fiscal demandada, quien realizó la imputación
formal solicitando su detención preventiva, basándose en un video documental emitido por el
canal “RED RECORD”, y medios de circulación local y nacional, de la República Federal, de
Brasil en idioma portugués. Desarrollada la audiencia de medidas cautelares, denunció la
ilegalidad de su aprehensión y que en el allanamiento a su domicilio, no se encontró sustancia
controlada alguna; empero, sin considerar su presentación voluntaria a prestar su declaración
informativa el Juez Primero de Instrucción en lo Penal declaró la legalidad de la aprehensión.

Refiere, que el video en idioma extranjero, no puede constituir un elemento de certeza de que la
sustancia manipulada era cocaína; por cuanto, no existen los suficientes elementos de convicción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 213


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

para la aplicación de la medida de última ratio obteniéndose la prueba ilícitamente porque se


desconoce quién filmó ese documental, elementos que no fueron considerados por la Fiscal y
Juez demandado y bajo los mismos argumentos, interpuso el recurso de apelación incidental,
resuelta por los Vocales de la Sala Penal y Administrativa, quienes confirmaron la resolución
impugnada, bajo el argumento que el narcotráfico es un delito de lesa humanidad.

No obstante, interpuso excepción de falta de acción, rechazada por Auto 20/2012; finalmente, el
17 de enero de igual año, solicitó la cesación a la detención preventiva, señalándose audiencia
para su consideración para el 25 de ese mes y año.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos al debido proceso y a la libertad.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción y se anule todo el proceso hasta el vicio mas antiguo, restituyendo
su derecho a la libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 20 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
297 a 300, con la presencia de la accionante asistida por su abogado, los codemandados;
ausentes el Juez Primero de Instrucción en lo Penal y el representante del Ministerio Público, se
produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, ratificó el contenido íntegro de la acción de libertad.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas.

Ponciano Ruiz Quispe, Vocal de Sala Penal y Administrativa, no presentó informe escrito y en
la audiencia manifestó: a) En el recurso de apelación planteado se analizaron y resolvieron los
puntos cuestionados; b) Cumplidas las formalidades legales se estableció que la aprehensión fue
legal; c) El presente caso se trata de un delito de narcotráfico y no de bagatela; su detención
preventiva se dispuso en base a verificarse la existencia de suficientes elementos de prueba para
presumir su autoría y que no se someterá a la investigación; d) La accionante, no desvirtuó el
riesgo procesal de fuga con medios documentales que acredite su trabajo, dado que simplemente
se limitó a mencionar que era ama de casa; e) Respecto del peligro de obstaculización, el Juez de
la causa consideró que la accionante en libertad, podría influir en la investigación; y f)
Solicitando se deniegue la acción de libertad.

Germán Miranda Guerrero, Vocal Sala Penal y Administrativa, no presentó informe escrito y en
audiencia expresó: 1) La acción de libertad, emerge a consecuencia de que la accionante no se
está conforme con la decisión de la medida cautelar; 2) En grado de apelación, se resolvieron
todos los puntos apelados por la accionante; 3) A consecuencia de la difusión de un video donde
se identifica a Gladis Cardenas Azad, donde supuestamente estaría vendiendo o traficando
sustancias controladas, la fiscalía emitió mandamiento de aprehensión en su contra, por
considerar que existen suficientes elementos de convicción para sostener que es autora de los
hechos que se investigan; 4) En esta etapa no se puede determinar si la prueba fue legal o

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 214


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ilegalmente obtenida, dado que ello se establecerá en juicio; 5) La accionante no acreditó su


ocupación, por cuanto existe peligro de fuga, circunstancia que puede ser desvirtuada más
adelante; 6) Continua vigente el peligro de obstaculización por tratarse de un delito de sustancias
controladas en el que pueden participar muchas personas; y 7) Solicitó se deniegue la presente
acción.

Daniel Lobo, en representación de la Fiscal María Jaqueline Bascope Gonzales, codemandada,


bajo el principio de unidad, asistió a la audiencia, e indicó: i) La investigación se apertura a
denuncia de Luis Felipe Dorado, Diputado Nacional; ii) En el allanamiento, no se encontró
sustancia controlada; empero, la accionante fue plenamente identificada en el video ofreciendo
sustancias controladas, por cuanto existe un objeto de investigación de acuerdo al Art. 171 del
Código de Procedimiento Penal (CPP); y, iii) Se ratificó en todo lo manifestado en la audiencia
de medida cautelar por la Fiscal a cargo de la investigación y solicitó se ratifiquen las
resoluciones dictadas.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, Antonio Fagalde Revilla, René Rojas Bonilla y Juan U. Pereira Olmos
Vocales de la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niñez y Adolescencia del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando, constituido en Tribunal de Garantías, pronunció la
Resolución, denegando la acción de libertad, con los siguientes fundamentos: a) Gladis
Cárdenas Azad, planteó la acción de libertad con la única finalidad que se determine si es o no
autora del delito que se le imputa y no así para analizar los peligros procesales que dieron lugar
a su detención preventiva; b) La valoración efectuada por el Juez y confirmada por los Vocales
de la Sala Penal y Administrativa, codemandados, demuestran que se trata de una posible
participación en el hecho delictivo; c) Tanto el recurso de apelación incidental y la acción de
libertad, están dirigidas a probar que la imputada no tuvo participación en el hecho; d) El hecho
que no hubieran encontrado sustancias controladas, no constituye un elemento contundente que
demuestre que no sea con probabilidad autora del hecho, lo sustancial radica en su
comercialización; e) El Juez demandado, al haber considerado que existen suficientes los
elementos que la accionante sea con probabilidad autora del hecho y la concurrencia de los
peligros procesales, ordenó su detención preventiva, medida confirmada por la Sala Penal y
Administrativa. En ambas instancias actuaron de acuerdo a ley; y f) Para disponer la libertad de
la accionante, no se demostró la ilegalidad o no del video, ni la nulidad de obrados a través de
una Resolución judicial.

II. CONCLUSIONES

Efectuada la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. En proceso penal, seguido por el Ministerio Público contra la accionante por el presunto
delito de tráfico de sustancias controladas, el 15 de diciembre de 2011, se apersonó a la Fuerza
Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) a prestar su declaración informativa. En la
misma fecha y posterior a su declaración, la Fiscal codemandada ordenó su aprehensión,
emitiendo la respectiva Resolución y consiguiente mandamiento que se ejecutó inmediatamente
(fs. 98 a 104).

II.2. El 16 de diciembre de 2011, la fiscal realizó la imputación formal contra la accionante por
el delito de tráfico de sustancias controladas, ante el Juzgado Primero de Instrucción en lo Penal
(fs. 105 a 107). En audiencia de consideración de medida cautelar realizada el 17 de ese mes y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 215


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

año, mediante Resolución 281/2011, se ordenó su detención preventiva, por considerar que
existen los suficientes elementos de convicción que es autora o participe del hecho atribuido en
su contra. Acto procesal en el que denunció la ilegalidad de su aprehensión de su contra (fs. 144
a 147 vta.).

Recurrió de apelación el 19 de diciembre de 2011, cuestionando la legalidad de la aprehensión y


la admisión de la imputación formal respecto a que no se la encontró con sustancias controladas,
y la existencia de peligros procesales (fs. 155 a 157).

II.3. Mediante memorial de 23 de diciembre de 2011, la accionante interpuso excepción de falta


de acción, alegando que la acción no fue legalmente promovida y porque el video usado para el
inicio de la investigación fue obtenido en base a una información originada en un procedimiento
ilícito. Por Auto 20/2012 de 16 de enero, se rechazó dicho medio de defensa (fs. 279 a 282 vta. y
292 a 293 vta.).

II.4. El 17 de enero de 2012, la accionante, solicitó al Juez Primero de Instrucción en lo Penal,


la cesación a su detención preventiva, mediante proveído se fijó audiencia para su
consideración el 25 del mismo mes y año (fs. 295 y vta.). Acto procesal que no se desarrolló
debido a que Gladis Cárdenas Azad, planteó acción de libertad.

II.5. Interpuesta la acción de libertad el 18 de enero de 2012, la Sala Penal y Administrativa del
Tribunal Departamental se inhibieron de conocer dicha acción por ser demandados, remitiendo
obrados a la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niñez y Adolescencia (fs. 6 vta.).

II.6. Por decreto de 19 de enero de 2012, la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niñez y
Adolescencia, remite obrados al Juez de Sentencia manifestando que no tiene competencia sobre
el mismo conforme al art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE). El Juez de
Sentencia devolvió obrados indicando que dicha Sala debe conocer la acción en suplencia legal
de la Sala Penal y Administrativa, quienes se encuentran legalmente impedidos por ser
accionados (fs. 7 vta. a 9).

II.7. Remitida la causa nuevamente a la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niñez y


Adolescencia, por decreto de 19 de enero de 2012, devolvió la acción a la Sala Penal y
Administrativa; en la misma fecha dichos Vocales se excusaron de conocer la acción de libertad
por encontrarse dentro la causal del art. 48 num.5 de la Ley de Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP) (fs. 10 a 12 vta.). Por Auto de 20 de igual mes y año, declaró legal la
excusa y procedió con el trámite procesal de la acción, indicando que lo hace en “reemplazo de
la Sala Penal y Administrativa” (fs. 14).

III. FUNDAMENTOS JURIDICOS DEL FALLO

La accionante alega que en el proceso penal seguido en su contra por la presunta comisión del
delito de tráfico de sustancias controladas, la Fiscal a cargo de la investigación, ordenó su
aprehensión en base a un video y no así por haber sido encontrada en posesión de sustancias
controladas, el cual, no constituye elemento para el inicio del proceso en su contra. Actuación
que denunció en audiencia de consideración de medida cautelar ante el Juez Primero de
Instrucción en lo Penal, quien no consideró la inexistencia de suficientes elementos para dicha
investigación y ordenó su detención preventiva. En apelación, los Vocales de la Sala Penal y
Administrativa, confirmaron la decisión sin observar que no existen peligros procesales, la
inadmisibilidad de la imputación y la ilegalidad de la aprehensión. Por consiguiente corresponde

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 216


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

dilucidar en revisión, si los hechos denunciados son evidentes y si constituyen actos ilegales que
vulneraron los derechos de la accionante, con la finalidad de conceder o no la tutela solicitada.

III.1. De la competencia de los Jueces y Tribunales en acciones de libertad

Constituida la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niñez y Adolescencia del Tribunal


Departamental de Justicia de Pando, en Tribunal de Garantías en reemplazo de la Sala Penal y
Administrativa en la presente acción de libertad, corresponde a este Tribunal, realizar el
siguiente estudio:

III.1. De la competencia y sus características

La competencia, es entendida como la capacidad o aptitud que la ley reconoce a un juez, tribunal
u otra autoridad para ejercer sus funciones respecto a una categoría de asuntos o durante una
determinada etapa del proceso, permitiéndoles conocer, juzgar y resolver las causas civiles,
penales, administrativas o laborales que constituye la actividad que se realiza por el juzgador,
como un tercero imparcial, para los efectos de dirimir a través del proceso, el conflicto que las
partes han sometido a su decisión o a la administración de justicia. Emerge de disposiciones
legales expresas y su ejercicio incumbe al orden público.

Dentro de sus características se encuentra la indelegabilidad, es decir, un Juez no puede delegar


su competencia, pero si puede pedir que un tercero de otra circunscripción territorial realice
actos procesales; y, la extensibilidad, el que es competente para conocer un asunto, lo es también
para decidir todas las cuestiones e incidentes que se susciten en el curso del proceso con plenitud
de jurisdicción, que abarca desde los actos preliminares, demanda, recusación, contestación de
demanda, sentencia, así como para dictar sus resoluciones y ejecutar las mismas.

Por otro lado, la Ley de Organización Judicial de 1993 (LOJ.1993) en su art. 26, precisa que la
“Competencia es la facultad que tiene un tribunal o juez para ejercer la jurisdicción en un
determinado asunto”; establecida, al tenor del art. 27 del mismo cuerpo legal, en razón del
territorio, de la naturaleza, materia o cuantía.

Otro aspecto que determina la competencia, es el territorio, entendido, como el ámbito


geográfico dentro del cual el Estado ejerce soberanía y jurisdicción, por lo que resulta
incoherente que un juez administre justicia en todo el territorio nacional, de tal manera que por
lógica jurídica, éste se divide en distritos judiciales y en circunscripciones territoriales, dentro de
los cuales, tienen competencia para administrar válidamente justicia.

En ese entendido, el art. 49 del Código de Procedimiento Penal (CPP), establece, en cuanto a
territorio, que serán competentes:

1) El juez del lugar de la comisión del delito. El delito se considerará cometido en el lugar donde
se manifieste la conducta o se produzca el resultado;
2) El juez de la residencia del imputado o del lugar en que éste sea habido;

3) El juez del lugar donde se descubran las pruebas materiales del hecho;

4) Cuando el delito cometido en territorio extranjero haya producido sus efectos en territorio
boliviano, conocerá el Juez del lugar donde se hayan producido los efectos o el que hubiera
prevenido;

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 217


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

5) En caso de tentativa, será el del lugar donde se realizó el comienzo de la ejecución o donde
debía producirse el resultado; y,

6) Cuando concurran dos o más jueces igualmente competentes, conocerá el que primero haya
prevenido.

III.1.2. El Juez o tribunal competente para conocer la acción de libertad

Al respecto, la SC 0756/2011-R de 20 de mayo, manifestó que la competencia consiste en: “la


capacidad o aptitud reconocida a un Juez o Tribunal para ejercer funciones respecto de un
asunto o materia, con la finalidad que la conozca y resuelva. En los procedimientos
constitucionales, también la competencia del tribunal de garantías es de vital importancia,
considerando que sus decisiones sólo serán válidas, si emergen de quién o quienes estén
revestidos de la facultad legal para asumir y decidir acerca de la presunta vulneración de
derechos fundamentales y garantías constitucionales.

Al respecto, conviene precisar que del debido proceso en su faceta adjetiva, se desprende uno
de sus componentes esenciales, el del juez natural, que en síntesis constituye la legitimación de
una decisión proveniente de quien la ejerce por mandato legal, en el ámbito de la jurisdicción
constitucional, de la propia Ley Fundamental, por ello coincidimos en afirmar que la
competencia no puede ser prorrogable por la voluntad del juzgador, ni la tolerancia de las
partes, no puede delegarse por decisión personal, sólo es admisible excepcionalmente por
excusa o recusación, tampoco puede ser atribuida o apropiada indebidamente por un juez o
tribunal, de hacerlo, sus actos y decisiones son nulos de pleno derecho, no tienen ningún
efecto, ni causan consecuencia jurídica alguna” .

III.1.3. Respecto de la competencia para conocer la acción de libertad

Al establecerse a la acción de libertad como una acción de defensa al interior de la CPE, el art.
125 establece como criterio de competencia a los órganos jurisdiccionales especializados en
materia penal al disponer: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer acción de libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera
a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad” (Las negrillas son
nuestras).

Dicho razonamiento constitucional, que otorga competencia para el conocimiento y


sustanciación de las acciones de libertad, de acuerdo a la SC 0756/2011-R de 20 de mayo, es
entendida a efectos de que asuman competencia “los jueces unipersonales, los tribunales
colegiados de orden superior, o sea a las salas penales de las diferentes Cortes Superiores,
asumiendo competencia con la brevedad, sencillez y efectividad necesaria en el resguardo del
derecho a la libertad. No es extensible esa competencia a otros jueces o vocales de otras salas,
salvo las circunstancias que así lo obliguen, como pudiera suscitarse que uno de sus
miembros de la sala penal o todos tengan alguna causal de excusa o fueren recusados, o, se
encontraren imposibilitados por otra circunstancia, podrá convocarse a otro vocal de sala
civil o administrativa o la que fuera, que pasa a conformar la sala penal competente, o en su
defecto todos los miembros otra sala, asumen la competencia de la sala penal para el caso en
concreto, pero únicamente ante una imposibilidad o impedimento concreto” (Las negrillas nos
corresponden).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 218


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En síntesis, dado que por disposición constitucional la acción de libertad solo podrá ser
conocida por un juez o tribunal en materia penal, en el supuesto de darse una situación
anómala procesal en la que un órgano jurisdiccional (juez unipersonal o tribunal) no
competente conociera la presente acción de defensa, sin observar la norma fundamental, sus
actos y su decisión, como se tiene dicho, son nulos, en consecuencia, corresponde dejar sin
efecto la decisión asumida por el tribunal incompetente y corregir el procedimiento, sin
ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada. Distinto fuere si se tratara de error
en la competencia territorial y no hubiere indefensión en la parte demandada, por economía
procesal no se anularían obrados conforme estableció la SC 0347/2010-R (Las negrillas son
nuestras).

III.1.4. Modulación a la SC 0756/2011-R de 20 de mayo

En ese contexto, expresamente la norma fundamental otorga competencia a los Jueces en


materia penal, para el conocimiento y sustanciación de la acción de libertad, por cuanto
ningún otro Juez o tribunal está habilitada para ejercer dicha competencia, ni siquiera en
suplencia legal, toda vez que si acaso no existiera juez o Sala Penal en el mismo Distrito
Judicial que asuma competencia, la acción de libertad debe ser resuelta necesariamente
por cualquier otro Juez en materia penal, es decir por Jueces y Tribunales de Sentencia en
Capitales de departamento y Jueces de Instrucción o Mixtos en provincias, exceptuando
los Jueces de Ejecución Penal debido a las atribuciones y competencias específicas
asumidas por Ley.

Es necesario aclarar que los Tribunales de Sentencia, asumirán excepcionalmente tal


competencia, sólo en caso de impedimento de la o las Salas Penales de la capital del
Distrito Judicial donde se haya presentado la acción de libertad, puesto que con relación a
su composición, dejarán de ser un Tribunal Penal de justicia ordinaria -compuesto por
cinco jueces, 2 técnicos y 3 ciudadanos-, y pasarán a asumir la competencia de un Tribunal
de Garantías Constitucionales -integrado por ambos jueces técnicos-, y sólo respecto a la
acción de libertad; en el entendido del contenido expreso del art. 125 de la CPE, “Toda
persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es
indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer acción de libertad y
acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal (…)”

Cabe señalar, que dicho razonamiento, constituye una modulación a la SC 0756/2011-R de


20 de mayo, pues esta acción tutelar puede ser presentada ante cualquier juez o tribunal en
materia penal, aspecto que no debe interpretarse restrictivamente en su contenido literal pues
de ser así, se desnaturalizaría los principios rectores y fines de esta acción tutelar, que se
caracteriza por la inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e inmediación, que
sobre cualquier interpretación, deben ser respetados y cumplidos en busca de hacer efectiva la
protección de los derechos a la vida y a la libertad, resguardados por esta acción.

Asimismo, del análisis a las normas y jurisprudencia citada, más las reformas introducidas por la
Ley 007 de 18 de mayo de 2010, promulgada bajo el actual orden constitucional, en su art. 54
inc. 10), establece las atribuciones de los Jueces de Instrucción indica: “Conocer y resolver la
Acción de Libertad, si no existieran jueces de sentencia en su asiento jurisdiccional, cuando sea
planteada ante ellos”.

En ese entendido, no existe duda alguna que la atribución del Juez de Instrucción en lo Penal,
para conocer y resolver una acción de libertad, sólo se da en provincias y de manera supletoria, y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 219


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

no así en las capitales de Departamento. De tal manera que cuando se da esta situación de
anomalía procesal en el elemento competencia en el trámite de esta acción tutelar, al ser ello una
situación de trascendental importancia, no es posible ingresar al análisis de fondo, sino anular
obrados a objeto de que se corrija procedimiento.

III.2. Aplicación prospectiva de la modulación a la SC 0756/2011-R y la necesidad de


analizar el caso concreto

III.2.1. La aplicación prospectiva de la jurisprudencia

El razonamiento desarrollado en el Fundamento Jurídico III.1.4, busca promover la vigencia


permanente de los principios consagrados en el art. 178 de la CPE, el art. 3 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, cuyo deber corresponde a este Tribunal y resguardar a su
vez el derecho que asiste a las partes al juez natural en su elemento competencia. No obstante de
ello, en el caso concreto, corresponde otorgar certidumbre, en función al principio de seguridad
jurídica, a la que tiene derecho la accionante por una parte; y por otra, que la modulación
efectuada a la SC 0756/2011-R de 20 de mayo, no sea interpretada de manera que se pretenda
aplicar en forma indiscriminada, en todos aquellos casos en los que autoridades judiciales -
constituidos en jueces o tribunales de garantías- de materias distintas a la penal tuvieron que
suplir a los de esta materia.

Bajo ese contexto, resulta aplicable a la presente modulación, la eficacia prospectiva de la


jurisprudencia o conocida también como prospective overruling, referida al cambio de un
precedente vinculante o la sustitución por otro que a partir de la introducción de un nuevo
razonamiento adquiere carácter vinculante en casos posteriores; dicho de otro modo, el cambio o
reemplazo del precedente vinculante, es aplicable en lo sucesivo y conforme a los criterios
asumidos en el nuevo fallo. En ese sentido, la presente Sentencia Constitucional, a partir de su
publicación tendrá carácter vinculante por mandato del art. 203 de la norma fundamental y del
art. 8 de la LTCP, por cuanto resulta aplicable a todos los casos posteriores.

Consecuentemente y en observancia del principio de seguridad jurídica, la aplicación de la


modulación que se realiza a la SC 0756/2011-R de 20 de mayo, sólo será de aplicación a
aquellas acciones que se inicien con posterioridad a la fecha de publicación de la presente
Sentencia Constitucional. A todas las demás acciones iniciadas anteriormente le serán aplicables
los preceptos desarrollados en la citada SC 0756/2011-R.

III.2.2. El principio de celeridad y la interpretación previsora

El art. 178.I de la norma fundamental, establece como uno de los principios que rigen la
administración de justicia a la celeridad, como componente del debido proceso, entendido como la
prontitud debida en los actos procesales a objeto de brindar la tutela jurisdiccional efectiva,
oportuna y acceso a la justicia (art. 115 de la CPE) y no colocar a las partes en incertidumbre
jurídica en el desarrollo de proceso. Principio refrendado por la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional, al reconocerla como uno de los principios sobre los que se rige la justicia
constitucional, al señalar que: “El ejercicio sin dilaciones indebidas en la administración de justicia
es el sustento de un fallo oportuno” -art. 3-. En correspondencia al citado principio constitucional,
la Ley del Órgano Judicial, refiere que la celeridad comprende el ejercicio oportuno y sin
dilaciones en la administración de justicia (art. 3.7).

Con relación a la interpretación previsora, la SC 1218/2010-R de 6 de septiembre señala: “No


obstante a lo señalado precedentemente, se debe tomar en cuenta que el Tribunal de garantías,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 220


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ingresó a analizar el fondo de la problemática planteada y denegó el recurso presentado por el


ahora accionante, extremo que obliga al Tribunal Constitucional a tomar en consideración dos
principios fundamentales; el primero, la interpretación previsora que exige velar sobre las
consecuencias y efectos de la determinación adoptada; en cuyo mérito, cabe señalar que al
basar este Tribunal su decisión únicamente en la improcedencia del recurso hoy acción en
razón a que el accionante no demandó a todos quienes pronunciaron las Resoluciones que
ahora impugna y cuya nulidad pretende, podría dar lugar a que éste, observando el requisito
extrañado, active nuevamente esta acción tutelar denunciando los extremos que ahora son
objeto de análisis.

Ante esta probable circunstancia, previendo los efectos de dicha decisión, cabe considerar que
si bien el Tribunal Constitucional ha ido corrigiendo la actuación de las partes, asegurando el
debido proceso y otros derechos fundamentales en los diferentes procesos constitucionales
sometidos a su conocimiento; sin embargo, debe tenerse en cuenta que este Tribunal se
encuentra resolviendo en liquidación causas que datan del año 2006 hasta el 6 de febrero de
2009; por lo que, el permitir que la causa que ha motivado la interposición de esta acción
tutelar vuelva a ser activada después de más de tres años de haberse resuelto el fondo de la
misma por parte del Tribunal de garantías, podría dar lugar a que innecesariamente se
interrumpa el normal desarrollo de los procesos judiciales y las consecuencias jurídicas que
oportunamente pudieron ser reparadas como emergencia de la decisión del Tribunal de
garantías, situación que no puede ser consentida por este Tribunal.

Un razonamiento contrario, implicaría permitir a las partes a que sin necesidad alguna vuelvan
a activar el aparato estatal, vía jurisdicción constitucional, cuando en los hechos no ha existido
lesión alguna a los derechos considerados lesionados; consecuencias que deberán ser
apreciadas en cada caso.

En esa perspectiva, el segundo principio que debe considerarse es el de economía procesal,


principio que no sólo busca la celeridad en la solución de los litigios para impartir pronta y
cumplida justicia, sino que a la vez tiene como finalidad“…evitar que el trabajo del juez se vea
duplicado y que el proceso sea más rápido, consiste, principalmente, en conseguir el mayor
resultado con el mínimo de actividad de la administración de justicia” (SC 0803/2005-R de 19
de julio), para lograr una justicia pronta y efectiva” (las negrillas y subrayado son agregados).

En función al razonamiento precedente y a que los principios de economía procesal y celeridad


tienen por finalidad hacer efectivo el precepto constitucional contenido en el art. 115 de la CPE,
respecto a garantizar el acceso a una justicia pronta, oportuna, efectiva y sin dilaciones; en el
presente caso resulta necesario ingresar al examen del problema jurídico planteado, en razón a
que la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niñez y Adolescencia, aún sin competencia para
resolver la presente acción, denegó la tutela solicitada y para ello efectúo un análisis de las
presuntas lesiones denunciadas por la accionante. En ese sentido, anular obrados implicaría que
el órgano jurisdiccional que se constituya como tribunal o juez de garantías realice un nuevo
pronunciamiento proveyéndose a un resultado con el mismo efecto, significando ello un
movimiento innecesario de la administración de justicia y perjuicio del accionante, siendo
previsiblemente se advirtió la inexistencia de dicha vulneración.

III.2.3 Análisis del caso concreto

De los hechos que dieron lugar a la interposición de la presente acción se advierte la existencia
de dos problemáticas a resolver a continuación:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 221


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2.3.1. Respecto de la existencia o no de los elementos que dieron lugar a la detención


preventiva

Sostiene la accionante que el video en función al cual, la fiscal codemandada ordenó su


aprehensión, no constituye elemento suficiente que motive el inicio de la investigación en su
contra, dado que en el allanamiento efectuado en su domicilio, no se encontraron sustancias
controladas; además, de no haberse considerado la falta de certeza acerca que la sustancia
manipulada en el video, sea cocaína. Aspecto, que el Juez Primero de Instrucción en lo Penal, no
hubiere considerado a tiempo de disponer la aplicación de la medida de última ratio,
inobservancia en la que también incurrieron los Vocales de la Sala Penal y Administrativa del
Tribunal Departamental de Justicia.

Al respecto, cabe recordar que los pronunciamientos de este Tribunal han sido uniformes al
establecer que no corresponde a esta jurisdicción, efectuar la labor de ponderación de los
elementos de convicción que motivaron la imposición de la medida cautelar de la detención
preventiva, dado que esa es una función privativa que corresponde únicamente a la jurisdicción
ordinaria. Así la SC 1284/2011-R de 26 de septiembre, reiterando el razonamiento asumido por
la SC 0539/2011-R de 29 de abril, afirmó: “Este Tribunal, ha establecido mediante su
jurisprudencia, en observancia de la competencia de la jurisdicción ordinaria, que bajo ningún
justificativo la jurisdicción constitucional puede interferir en el criterio que puedan emitir los
jueces para determinar la culpabilidad o no de un imputado; de igual manera, la existencia o
no del delito que se investigó, siendo que esta atribución le está asignada exclusivamente a la
jurisdicción ordinaria, no hallándose sujeta a control constitucional, pues ello significaría
suplantarla. Resultando aplicable también esta comprensión, a los actos investigativos que
son parte de la etapa preparatoria, al ser los fiscales en esta etapa, autónomos sobre la
compulsa de elementos probatorios respecto a la comisión del hecho denunciado.(…)

Además, se debe advertir que la imputación al ser provisional, es modificable; el accionante, si


consideraba que existe error en su formulación, debió impugnar esta situación ante el Juez
contralor de la investigación, a través de los mecanismos intra procesales concedidos por ley
al efecto, y en caso de persistir la lesión, a través de la acción de amparo constitucional. Lo
que no aconteció en el caso de autos.

Por otra parte, es necesario incidir en que las medidas cautelares de carácter personal son
revisables y aún modificables de oficio (art. 250 del CPP); razón por la que el imputado, en
virtud al art. 239.1 del Código citado, puede impetrar las veces que vea conveniente, la
cesación de la medida de detención impuesta en su contra: 'Cuando nuevos elementos de juicio
demuestren que no concurren los motivos que la fundaron o tornen conveniente que sea
sustituida por otra medida'. Teniendo a su alcance esta vía, para poder establecer que no
concurren las razones que motivaron su detención preventiva” ( las negrillas y el subrayado
añadidas son agregados).

En ese sentido, no puede ingresarse al examen de fondo de la primera problemática, dado que
corresponde a la jurisdicción ordinaria la ponderación de los suficientes indicios y presupuestos
para la imposición de medidas cautelares -personales o reales- y no a este Tribunal, cuya función
es resguardar el respeto de los derechos fundamentales y garantías constitucionales a través de la
acción de libertad; por cuanto corresponde denegar la tutela solicitada al respecto.

III.2.3.2. Respecto del carácter modificable de las medidas cautelares

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 222


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La Constitución Política del Estado en su art. 125, al establecer el alcance y finalidad del
presente medio de defensa, mantiene su triple carácter de acción preventiva, correctiva y
reparadora, además de resaltar su carácter de ser oportuna, eficaz para restablecer o restituir los
derechos a la libertad -física y de locomoción- y resguardar la vida cuando sea puesta en peligro.
En ese sentido, resulta pertinente recordar que el art. 250 de la norma adjetiva penal, establece
que las medidas cautelares de carácter personal -detención preventiva-, son revisables o
modificables en cualquier momento del proceso, aún de oficio; es decir, no causan ejecutoria. En
consecuencia, la medida cautelar de última ratio, puede ser modificada cuando nuevos
elementos demuestren que no concurren los elementos que dieron lugar a su imposición o que
los mismos desaparecieron, conforme prevé el art. 239 del CPP.

En el caso concreto, el 17 de enero de 2012, un día antes de la interposición de la acción de


libertad, Gladis Cárdenas Azad, solicitó al Juez Primero de Instrucción en lo Penal, la cesación a
la detención preventiva, que mediante proveído de 18 de ese mes y año, fijó audiencia para su
consideración y resolución, sin que la misma se hubiere realizado hasta la fecha de sustanciación
de la presente acción -Conclusión II.4 de este fallo-. Es decir, aún se encuentra pendiente el
pronunciamiento del Juez de la causa sobre la solicitud de la accionante para el restablecimiento
de su derecho a la libertad, ahora invocado. Circunstancia, que impide a esta jurisdicción
ingresar al análisis de fondo del problema jurídico planteado y que amerita la denegatoria de la
tutela solicitada.

En mérito a los argumentos expuestos, el Tribunal Constitucional considera que en el presente


caso, no puede desconocerse la competencia que asistió a la Sala Civil, Social, de Familia, de la
Niñez y Adolescencia del Tribunal Departamental de Justicia de Pando, el cual, actuando en
suplencia legal de la Sala Penal y Administrativa de dicho departamento, se constituyó en
Tribunal de garantías y emitió la Resolución.

En consecuencia, el Tribunal de garantías al haber denegado la acción tutelar, obró


correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada, en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, y el art. 12.7 Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión,
resuelve: DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de
fondo del problema jurídico planteado.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra. Soraida Chanez Chire.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 223


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0033/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00067-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 05/2012 de 19 de enero; cursante de fs. 131 a 133, pronunciada dentro de la
acción de libertad interpuesta por Ángel Remigio Gonzáles Saico contra Delfor Ríos Arrueta,
Juez Sexto de Sentencia; Ramiro López Guzmán y Elías Fernando Ganam Cortez, Vocales de
la Sala Penal Segunda y Tercera, respectivamente, todos del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por memorial presentado el 17 de enero de 2012, corriente de fs. 1 a 6 el accionante indicó, que
dentro de la acción penal seguida a querella de Mónica Viviana Frías Landa, se dictó la Resolución
390/2008 de 4 de noviembre, el Juez Sexto de Sentencia, Delfor Ríos Arrueta, otorgó medidas
sustitutivas a la detención preventiva a favor de éste.

Posteriormente, como consecuencia a la petición de revocatoria de las medidas sustitutivas impuestas,


que fue formulada por el apoderado legal de la querellante, se emitió la Resolución 098/2011 de 12 de
mayo, disponiendo la revocatoria de las mismas y en su lugar se dispuso la detención preventiva del
accionante.

Habiendo dicha Resolución sido apelada por la parte ahora accionante, la misma fué confirmada por
los Vocales de la Sala Penal Segunda y Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,
mediante Resolución 636/2011 de 29 de julio.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante alega la vulneración a su derecho a la libertad, consagrada en los arts. 125 y ss. de
la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, disponiendo se deje sin efecto la Resolución 098/2011 de 12 de


mayo y el Auto de Vista 636/2011 de 29 de julio, ordenando al Juez Sexto de Sentencia en lo
Penal, dictar nueva resolución.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 224


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Celebrada la audiencia pública el 19 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
126 a 130 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó los términos de la demanda y añadiendo indicó que: a) Si
bien su defendido, tiene un proceso penal a querella de Mónica Viviana Frías Landa, quien
solicitó la medida cautelar de carácter personal (detención preventiva), refiere que en una
primera instancia, el Juez Sexto de Sentencia, dispuso la aplicación de medidas sustitutivas a la
detención preventiva a favor del accionante, consistente en arraigo, fianza personal y
prohibición de cambiar de domicilio, medidas que fueron cumplidas por el accionante; y b)
Asimismo, impetró se deje sin efecto las dos Resoluciones recurridas y se ordene al Juez Sexto
de Sentencia dictar nueva resolución, en mérito a los fundamentos referidos y se disponga la
inmediata libertad del accionante.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Mediante escrito cursante de fs. 10 a 11, los Vocales, Elías Fernando Ganam Cortez y Ramiro
López Guzmán, informaron lo siguiente: 1) El 29 de julio de 2011, circunstancia en la que se
encontraban en suplencia de la Sala Penal Primera, dictando el Auto de Vista 636/2011 de 29 de
julio; 2) Radicada la causa, se señaló audiencia de revocatoria de medidas cautelares dentro del
recurso de apelación interpuesto por el ahora accionante contra la Resolución 098/2011 de 12 de
mayo, refieren que la misma cumplía los requisitos previstos en el art. 124 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), habiéndose realizado una valoración concreta, objetiva y
subsumible en relación a los hechos y a los elementos de convicción; 3) El Juez Sexto de
Sentencia procedió a revocar la medida cautelar que se le había impuesto al ahora accionante, en
consideración a que, modificó su domicilio, porque en un primer proceso señaló la calle 22 77
de la zona de Chasquipampa y en otro proceso penal que se le había iniciado por el delito de
injurias y calumnias, señaló como domicilio la calle 53 707 de la zona de Chasquipampa; 4) En
el caso presente, el imputado incurrió en las causales del art. 247incs. 1) y 3) del CPP, al haber
cambiado de domicilio y al advertir la existencia de otro proceso penal, iniciado en su contra,
por la comisión de otro delito; aspectos que constituyeron fundamentos para que el Juez a quo
modificara las medidas sustitutivas; y, 5) Por otra parte, es preciso señalar que las decisiones del
Auto que impuso una medida cautelar es modificable aún de oficio, tal como lo dispone el art.
250 del mencionado Código, al que podía acogerse el imputado.

Por su parte Delfor Ríos Arrueta, Juez Sexto de Sentencia, ahora codemandado presentó informe
cursaste de fs. 12 a 14, indicando: i) Previa valoración de antecedentes, pronunció la Resolución
098/2011 de 12 de mayo, por la que revocó las medidas sustitutivas y ordenó la detención
preventiva del ahora accionante, en aplicación de los arts. 247 incs. 1) y 3), 250, 234 incs. 4) 5)
6) y 8) y 235 inc. 5) del CPP, así como de las SSCC 0025/2010-R y 1200/2000-R; ii)
Posteriormente, la mencionada Resolución fue apelada y conocida por la Sala Penal Tercera,
misma que confirmó el fallo apelado a través del Auto de Vista 636/2011 de 29 de julio,
Resoluciones que ahora son impugnadas por medio de la acción de libertad, pretendiendo que el
Tribunal de garantías vuelva a valorar la prueba; iii) Respecto a la probabilidad de autoría, la SC
0025/2010-R de 13 de abril, que es de carácter vinculante, refiere que el juez puede revocar las
medidas sustitutivas, únicamente cuando el imputado incumpla alguna de las obligaciones
impuestas, debiendo la referida autoridad limitarse a verificar la concurrencia de las tres
causales establecidas en la norma iv) Por otro lado, el accionante antes de que se dispusiera la
revocatoria y estando en libertad con medidas sustitutivas a la detención preventiva, en vez de
someterse al proceso y esclarecer los hechos, haciendo abuso del derecho y con total falta de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 225


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

lealtad procesal, se dio a la tarea de presentar demandas de recusación, obstaculizando la


averiguación de la verdad y la tramitación del proceso.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Primera, del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituido en


Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 05/2012, cursante de fs. 131 a 133, en la que
denegó la acción de libertad interpuesta con los siguientes argumentos: a) Mediante Resolución
390/2008, el Juez Sexto de Sentencia, dispuso la aplicación de medidas sustitutivas a la
detención preventiva, del ahora accionante, consistentes en arraigo, fianza personal y
prohibición de cambiar de domicilio; b) La prohibición del cambio de domicilio, fue incumplida
por el accionante, toda vez que en el Juzgado Sexto de Sentencia, señaló como su domicilio la
calle 53 de Chasquipampa; sin embargo, en otro proceso penal ante el Ministerio Público, indico
como su domicilio la calle 22 de la zona de “Achumani”; motivo por el cual la medida
sustitutiva a la detención preventiva fue revocada; y c) Finalmente, al haberse demostrado el
incumplimiento de las medidas sustitutivas impuestas a su favor; en aplicación al art. 247 del
CPP y a la amplia jurisprudencia constitucional, respecto a las causales de revocación, denegó la
tutela solicitada.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Cursa Resolución 390/2008 de 4 de noviembre, en la cual el Juez Sexto de Sentencia,


dispone la libertad del imputado, ahora accionante, bajo la aplicación de medidas sustitutivas a
la detención preventiva prevista en el art. 240 del CPP (fs. 97 a 99).

II.2. Mediante memorial de 7 de octubre de 2009, Edwin Enriquez Mercado en representación


de Mónica Viviana Frías Landa, solicitó la revocatoria de las medidas sustitutivas de las que
goza el imputado, Ángel Remigio Gonzales Saico (fs. 102 a 103).

II.3. Por Resolución 098/2011 de 12 de mayo, el Juez demandado revocó las medidas
sustitutivas y en su lugar dispone la detención preventiva del imputado, en el penal de “San
Pedro”, en aplicación de los arts. 247 incs. 1) y 3), 250, 234 incs. 4) 5) 6) y 8) y 235 inc. 5) del
CPP (fs. 104 a 107).

II.4. Resolución 636/2011 de 29 de julio, que declara improcedente la apelación interpuesta por
el accionante, y confirma la Resolución 098/2011 dicta por el Juez Sexto de Sentencia (fs. 94 a
96 vta.)

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega vulneración de su derecho a la libertad, por cuanto el Juez Sexto de


Sentencia, por Resolución 098/2011, revocó las medidas sustitutivas a la detención preventiva,
fallo que fue confirmado en apelación por Auto de Vista 636/2011, emitida por los Vocales
codemandados. En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son
evidentes a fin de conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. Sobre la obligatoriedad en el cumplimiento de las medidas sustitutivas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 226


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Debemos referirnos necesariamente al art. 23.I de la CPE, que señala: “Toda persona tiene
derecho a la libertad y seguridad personal. La libertad personal sólo podrá ser restringida en los
límites señalados por ley, para asegurar el descubrimiento de la verdad histórica en la actuación
de las instancias jurisdiccionales”.

Al respecto, y de conformidad con el texto constitucional, el art. 240 del CPP, establece lo
siguiente: “Cuando sea improcedente la detención preventiva y exista peligro de fuga u
obstaculización del procedimiento, el juez o tribunal, mediante resolución fundamentada, podrá
disponer la aplicación de una o más de las siguientes medidas sustitutivas:(…) Al resolver la
aplicación de las medidas enumeradas anteriormente, el juez determinará las condiciones y
reglas que deberá cumplir el imputado, con la expresa advertencia de que la comisión de un
nuevo delito o el incumplimiento de las reglas impuestas, dará lugar a la revocatoria de la
medida y su sustitución por otra mas grave incluso la detención preventiva cuando ésta sea
procedente…”.

Estas medidas sustitutivas deben ser de cumplimiento obligatorio, toda vez que el carácter
imperativo de la norma citada, obliga al cautelado o procesado, para que las cumpla fielmente y
a cabalidad, bajo pena de revocarse estas e imponerse la detención preventiva, en casos de que la
misma sea procedente. Así lo comprendió la jurisprudencia constitucional en la SC 0578/2011-R
de 3 de mayo, entre otras.

III.2. De la revocatoria de las medidas sustitutivas a la detención preventiva

El art. 247 del CPP, refiere las causales para la revocación de las medidas sustitutivas a la
detención preventiva, estableciendo: “Las medidas sustitutivas a la detención preventiva podrán
ser revocadas por las siguientes causales:1) Cuando el imputado incumpla cualesquiera de las
obligaciones impuestas;2) Cuando se compruebe que el imputado realiza actos preparatorios de
fuga o de obstaculización de la averiguación de la verdad;3) Cuando se inicie en contra del
imputado un nuevo proceso penal por la comisión de otro delito. La revocación dará lugar a la
detención preventiva en los casos en que esta medida cautelar sea procedente”.

Por su parte, la jurisprudencia constitucional en la SC 025/2010-R de 13 de abril, ha establecido


que el juez puede revocar las medidas sustitutivas, “…únicamente cuando el imputado incumple
alguna de las obligaciones impuestas…”

III.3. De la fundamentación de las resoluciones que determinen la detención preventiva.

La detención preventiva como medida cautelar de carácter personal, puede ser dispuesta por la
autoridad jurisdiccional, cuando existan elementos suficientes que determinen que el imputado
es con probabilidad autor del delito que se le atribuye, o que no se someterá a proceso u
obstaculizará la averiguación de la verdad; la misma que será dispuesta mediante resolución
debidamente fundamentada, conforme lo prevé el art. 236 del CPP.

En este sentido la jurisprudencia constitucional ha señalado en su SC 0089/2010-R- de 4 de


mayo, “En los casos en que un Tribunal de apelación decida revocar las medidas sustitutivas y
a la par disponer la aplicación de la detención preventiva de un imputado, está obligado
igualmente a dictar una resolución debidamente fundamentada sobre la necesidad de aplicar
dicha medida cautelar de carácter personal, explicando la concurrencia de los dos requisitos
determinados en el art. 233 del CPP. En ese sentido, se ha establecido que el tribunal de
apelación, está obligado a motivar y fundamentar su resolución, precisando los elementos de
convicción que le permiten concluir en la necesidad de revocar las medias sustitutivas y aplicar

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 227


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la detención preventiva; a cuyo efecto, debe también justificar la concurrencia de los


presupuestos jurídicos exigidos por el art. 233 del CPP y una o varias de las circunstancias
señaladas por los art 234 y 235 del CPP, mediante una resolución debidamente fundamentada,
conforme exige el art. 236 del CPP, puesto que sólo cuando se han fundamentado debidamente
estas dos situaciones se puede disponer la detención preventiva”.

Asimismo, la fundamentación de las resoluciones judiciales no sólo es exigible al momento de


imponer la detención preventiva, sino también cuando se rechaza la solicitud de cesación de la
detención preventiva, se dispone la sustitución o modificación de esa medida o finalmente,
cuando se revoca; aclarándose que la fundamentación se exige tanto en las resoluciones
pronunciadas en primera instancia como aquellas emitidas en apelación y en toda decisión
judicial. Los vocales deben precisar los elementos de convicción que les permitan concluir en la
necesidad de revocar las medidas sustitutivas y aplicar la detención preventiva, debiendo
justificar la concurrencia de los presupuestos jurídicos exigidos en el art. 233 del CPP.

III.4. Del Caso Concreto

Dentro del proceso penal seguido contra el ahora accionante, la parte querellante, solicitó ante el
Juez Sexto de Sentencia, se revoque las medidas sustitutivas a la detención preventiva, de las
cuales gozaba el querellado, bajo el fundamento de que éste, no habría cumplido con los
requisitos y las medidas impuestas, toda vez que en otro proceso penal que se le sigue, tendría
señalado otro domicilio, habiéndosele impuesto como condicionante a las medidas sustitutivas,
entre otros aspectos, la prohibición del cambio de domicilio, lo cual fue incumplido por el
accionante; así como la existencia de otro proceso penal en su contra.

En el presente caso, si bien es cierto que el accionante se benefició con la aplicación de medidas
sustitutivas a la detención preventiva consistentes en: 1) Arraigo; 2) Fianza personal; y 3)
Prohibición de cambiar de domicilio. Sin embargo; sin autorización de la autoridad judicial, el
accionante cambió de domicilio, hecho que fue puesto en conocimiento del Juez de la causa por
la parte querellante, y ante la constatación de este aspecto, dicha autoridad, mediante Resolución
fundada, revocó las medidas sustitutivas a la detención preventiva, imponiéndole al accionante,
la detención en el penal de “San Pedro”; debiendo señalarse que el Juez a quo, fundamentó su
Resolución conforme los arts. 247 inc. 3); 234 y 235 del CPP, toda vez que a fs. 55, hace un
razonamiento lógico del incumplimiento de las medidas cautelares impuestas y las causales de
revocación de las mismas, y los peligros de fuga y de obstaculización de la justicia al indicar
respecto al imputado: “…lejos de pedir un pronunciamiento sobre el fondo del proceso, y
contribuir a la averiguación de la verdad, se ha limitado a interponer cinco demandas de
recusación, que fueron rechazadas por el órgano jurisdiccional y también fueron rechazadas por
el Tribunal Superior” (sic); Asimismo, el Juez antes referido, hizo un análisis razonado de otros
extremos referentes al peligro de fuga y la obstaculización de la justicia, dentro del proceso
penal, así como la valoración de otros extremos en otro proceso penal seguido contra el
accionante, fundamentando así su decisión de revocación de las medidas sustitutivas a la
detención preventiva, imponiéndole la detención preventiva.

A pesar de haber apelado dicha determinación el accionante, el Tribunal ad quem haciendo una
apreciación de los elementos y de la prueba ofrecida, confirmó dicha Resolución, indicando que
el Juez Sexto de Sentencia, al revocar las medidas sustitutivas mediante Resolución 98/2011, lo
hizo de forma motivada y fundamentada.

Por los fundamentos expuestos, el Tribunal de garantías al denegar la acción de libertad, obró
en forma correcta.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 228


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud


de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0034/2012


Sucre, 16 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00011-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 01/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 22 a 24, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Natividad Salinas Vda. de Herrera, contra Ramiro
Ariel Julio Blanco Fuentes, Juez de Instrucción de Caranavi (en Suplencia Legal) del
Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de enero de 2012, cursante de fs. 8 a 9, el accionante expresa los
siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La accionante manifiesta que el 10 de enero de 2012 a horas 6:00, fue detenida en la localidad
de El Palmar, por efectivos de la Policía de la localidad de Yucumo del departamento del Beni,
en virtud del mandamiento de aprehensión de 30 noviembre de 2011, librado por Ramiro Ariel
Julio Blanco Fuentes, Juez de Instrucción de Caranavi (en suplencia legal); quienes luego de
detenerla, la trasladaron hasta la localidad de Caranavi, encerrándola en las celdas policiales de
la mencionada capital de provincia.

Añade que, el mandamiento de aprehensión, emitido por Ramiro Ariel Julio Blanco Fuentes es
totalmente ilegal y arbitrario, violenta la Constitución Política del Estado, la Ley Procesal Penal,
los Tratados y Convenios Internacionales en la materia, toda vez que según los antecedentes
cotejados en el cuaderno de investigaciones del caso 107/2011, se tiene que el 28 de marzo de
2011, Virginia Flores Guizada presentó denuncia penal en contra de la accionante en la fiscalía
de Caranavi, por el supuesto delito de robo; por lo que el entonces Fiscal de Materia de dicha la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 229


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

localidad, Ramiro Ariel Julio Blanco Fuentes, en la misma fecha informó el inicio de
investigaciones al Juez de Instrucción de Caranavi, Juvenal Flores Reyes. Añade que el
mencionado Fiscal de Materia, emitió varios requerimientos en el desarrollo de la investigación
preliminar del referido proceso penal, para luego renunciar al cargo y posteriormente ser
nombrado Juez de Instrucción de Coroico. Por su parte, el Juez de Instrucción de Caranavi se
jubiló a mediados de junio de 2011, razón por la que se nombró en suplencia legal del Juez de
Instrucción de Coroico a Ramiro Ariel Julio Blanco Fuentes, aspecto que lo obligaba a excusarse
de conformidad al art. 316 núm. 1 del Código de Procedimiento Penal (CPP).

Manifiesta que nunca fue notificada con la imputación formal, sin embargo el Juez suplente,
habría dictado varias resoluciones y proveídos, inclusive declarándola en rebeldía.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante señala que se conculcaron sus derechos consagrados en los arts. 115, 116, 117,
119, 120 y 122 de la Constitución Política del Estado (CPE), sin especificar los mismos, en
razón a que se encuentra indebidamente procesada e ilegalmente detenida y privada de su
libertad.

I.1.3. Petitorio

Se solicita se declare procedente la acción y se ordene la inmediata restitución de su libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 12 de enero de 2012 a horas 14:30, según consta en acta
cursante de fs. 20 a 21, produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante ratificó los fundamentos vertidos en su acción de libertad; alegando
persecución y detención indebida y que con ello se habría vulnerado el debido proceso, su
derecho a la defensa y a ser oída, por lo que solicita el cese de la persecución penal.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez de Instrucción de Caranavi (en suplencia legal) del Tribunal Departamental de Justicia
de La Paz demandado, Ramiro Ariel Julio Blanco Fuentes, en la audiencia de consideración de
la acción de libertad de 12 de enero de 2012 (fs. 20 vta. a 21), manifestó lo siguiente: i) Que de
acuerdo a lo expresado por el accionante, el mandamiento de aprehensión sería arbitrario, ya que
se encontraría dentro de las causales de excusa y recusación; ii) Que cuando asumió el
conocimiento de la causa existía una orden instruida emitida por Juvenal Flores, que fue
devuelta por la Policía quien indica que la imputada se habría rehusado a firmar; iii) Devuelta la
diligencia y en el entendido de que la imputada fue notificada y ésta se rehusó a firmar la
diligencia de notificación, se instaló la audiencia en la que no se presentó la ahora accionante,
por lo que se hicieron conocer los edictos correspondientes mediante radiodifusión; iv) Señala
que el mismo día de la acción de libertad, 12 de enero de 2012, se llevó a cabo la audiencia de
medidas cautelares, determinándose que la aprehensión fue realizada en una hora inadecuada,
disponiéndose la libertad pura y simple de la imputada; v) Refiere que la jurisprudencia
constitucional exige que no exista subsidiaridad y que la imputada no se encuentra en plena
indefensión, ya que no acudió a la institución de la recusación y de manera maliciosa utilizó éste

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 230


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

recurso constitucional; y, vi) Que habiéndose restituido su libertad solicita se deniegue la tutela
solicitada.

I.2.3. Resolución

El Juzgado de Partido Mixto de Caranavi del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,


constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 01/2012 de 12 de enero de 2012,
cursante de fs. 22 a 24, concediendo la tutela solicitada por la accionante y restituyendo su
libertad, con los siguientes fundamentos: 1) La autoridad jurisdiccional demandada vulneró el
debido proceso, al no habérsele notificado con la denuncia y toda la acción interpuesta en contra
de su persona; 2) El Juez que dispuso su detención indebida fue fiscal y acusador anteriormente,
y ahora como Juez expidió mandamiento de aprehensión, por lo que sus actuación se encuentra
viciada al estar inmerso en la previsión del art. 316 del CPP; 3) Que conforme dispone el art.
125 de la CPE, la acción de defensa tiene la finalidad de proteger y restablecer la libertad
personal, frente a una persecución o detención indebida, citando la SC 001/2010-R de 6 de abril;
4) Respecto a la persecución indebida, si bien cursa denuncia, imputación formal y declaratoria
de rebeldía, la autoridad demandada estaba legalmente impedida de conocer el caso de autos, ya
que al ser juez y parte, vulnera el principio de juez natural, pues no es imparcial, mencionando al
efecto las SSCC 0491/2003-R y 0055/2005-R; y, 5) Conforme dispone el art. 321 del CPP,
establecida la causal de excusa, el Juez no podrá conocer ni realizar ningún acto del proceso bajo
sanción de nulidad, en consecuencia, los actos de la autoridad demanda son nulos por el imperio
de la norma citada.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y análisis de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se establece lo


siguiente:

II.1. Ramiro Ariel Julio Blanco Fuentes, desempeñó funciones como Fiscal de Materia de la
provincia de Caranavi, en el caso 107/2011 a instancias de Virginia Flores Guizada en contra de
Natividad Salinas y otro, conforme se evidencia del informe de inicio de investigaciones de 28
de marzo de 2011 (fs. 2); Informe del investigador asignado al caso, cabo Ismael Limachi
Choque de 28 de marzo de 2011 (fs. 4); resolución de secuestro de 25 de marzo de 2011 (fs. 5) y
mandamiento de secuestro de la misma fecha (fs. 6).

II.2. Que el mencionado, Juez de Instrucción de Coroico, ejerció suplencia legal por el Juzgado
de Instrucción cautelar de la provincia de Caranavi, dentro del proceso penal seguido por el
Ministerio Público contra Natividad Salinas por el delito de robo, conforme se desprende del
mandamiento de aprehensión de 30 de noviembre de 2011, expedido por la autoridad citada (fs.
7) y que fue ejecutado en fecha 10 de enero de 2012, como consta en el acta de representación y
acta de recepción cursante a fs. 7 vta.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia que fue detenida ilegalmente el 10 de enero de 2012 por efectivos de la
Policía de la localidad de Yucumo del departamento del Beni, en virtud de un mandamiento de
aprehensión ilegal y arbitrario, toda vez que este habría sido emitido por una Autoridad
Jurisdiccional que anteriormente fungió como fiscal acusador dentro de la misma causa, razón
por la que debió excusarse de conformidad al art. 316.1 del CPP, pero no lo hizo; aspecto que
violenta la Constitución Política del Estado, la Ley Procesal Penal y los Tratados y Convenios

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 231


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Internacionales en la materia, concretamente el debido proceso y la garantía de imparcialidad del


juez que conoce la causa.

III.1. El alcance y finalidad de la acción de libertad.

La SC 1079/2011-R de 16 de agosto, ha señalado que: "El art. 23.I de la CPE, establece que
toda persona tiene derecho a la libertad, la que podrá ser restringida en los límites señalados
por ley, para lograr el descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las instancias
jurisdiccionales, y el art. 13.I del mismo cuerpo legal, dispone que los derechos reconocidos por
la Ley Fundamental son inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y progresivos,
siendo deber del Estado el promoverlos, protegerlos y respetarlos.

La Declaración Universal de Derechos Humanos, instrumento que forma parte del bloque de
constitucionalidad, en su art. 8 establece el derecho de toda persona a contar con un recurso
efectivo ante los tribunales competentes para resguardar sus derechos, criterio también
recogido por el art. 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

El art. 125 de la CPE, establece: 'Toda persona que considere que su vida está en peligro, que
es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera
a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad'.

De conformidad a la disposición constitucional citada y en aplicación y vigencia de la


Constitución Política del Estado, esta acción se encuentra destinada a la defensa de los
derechos a la vida y a la libertad personal; es una acción de carácter extraordinario, de
tramitación especial y sumarísima. A través de dicha acción, se preserva el derecho a la vida,
se evita una detención ilegal, o se repara la ilegal restricción de la libertad o el procesamiento
indebido, manteniendo las características de inmediatez de la protección, informalismo,
generalidad e inmediación; procede contra cualquier autoridad pública, pues no reconoce
fueros ni privilegios.

Ahora bien, solamente puede ingresarse al análisis de la problemática planteada mediante la


acción de libertad, cuando los actos denunciados operan como causa para la amenaza,
restricción o supresión de los derechos a la libertad física además, de agotarse previamente los
mecanismos intra-procesales para que la acción de libertad se active y; se prescindirá del
segundo requisito, de no haberse agotado los medios legales, cuando el accionante estuvo en
absoluto estado de indefensión y no tuvo la oportunidad de activar mecanismos intra-
procesales.

En este sentido -como se dijo- la acción de libertad, por la urgencia de la situación, se


configura como el medio más eficaz para restituir los derechos afectados; sin embargo, en caso
de existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y
oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido,
deben ser activados previamente por el o los interesados o afectados; en estos casos, la acción
de libertad operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar
de haberse agotado estas vías específicas.

De lo expuesto precedentemente, debe establecerse que en caso de existir norma expresa que
prevea mecanismos intra-procesales efectivos y oportunos de defensa de estos derechos

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 232


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fundamentales, deben ser utilizados previamente antes de activarse la tutela constitucional,


aspecto que se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos".

La Declaración Universal de los Derechos Humanos que constituye el reconocimiento universal


de que los derechos básicos y las libertades fundamentales son inherentes a todos los seres
humanos, sus instrumentos conexos como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, sus dos protocolos complementarios y el Pacto Internacional de Derechos Económicos
Sociales y Culturales, instrumentos suscritos en el ámbito del Sistema de la Organización de
Naciones Unidas, conforman la Carta Universal de Derechos Humanos, y por otra parte, la
Convención Americana de Derechos Humanos, suscrita en el ámbito regional interamericano,
todos ellos aprobados y ratificados por el Estado Plurinacional de Bolivia, constituyen
instrumentos de Derecho Internacional de los Derechos Humanos y forman parte del Bloque de
Constitucionalidad de nuestro país, por impero de lo establecido en el artículo 410. II de la CPE.

III.2. El deber legal de excusa para Juez en materia penal

El art. 318 del CPP indica que: “El juez comprendido en alguna de las causales establecidas en
el art. 316 de este Código, está obligado a excusarse, mediante resolución fundamentada,
apartándose de inmediato del conocimiento del proceso”. De la norma citada se infiere que, si la
autoridad jurisdiccional incurre en algunas de las causales contempladas en el art. 316 del CPP,
está constituido, por la naturaleza del cargo, a apartarse del conocimiento de la causa, con la
finalidad de preservar la garantía del juez imparcial, entendida como tercero ajeno al conflicto y
a las partes, garantía que se encuentra consagrada en el art. 120.I de la CPE, que a su vez forma
parte integrante del derecho y garantía del debido proceso, plasmado en los arts. 115.II y 117.I
de la Ley Fundamental.

III.3. Análisis del caso concreto

De los antecedentes que cursan en el expediente, se evidencia que en una primera instancia, Ramiro
Ariel Julio Blanco Fuentes, fungió como Fiscal de Materia dentro del proceso penal que motiva
la presente acción de libertad, quien posteriormente asumió el cargo de Juez de Instrucción de
Coroico y que ante la jubilación de Juvenal Flores Reyes, por entonces Juez de Instrucción de
Caranavi, ejerció suplencia legal del Juzgado de Instrucción cautelar de Caranavi, situación que
evidencia que Ramiro Ariel Julio Blanco Fuentes, reunió en su persona la calidad de acusador y
juez dentro del mismo proceso penal; figura que de conformidad al mandato legal previsto en los
art. 316.1 y 318 del CPP, lo obligaba a excusarse, independientemente si la imputada, ahora
accionante, promovía o no la recusación contra su persona.

Del mandamiento de aprehensión de 30 de noviembre de 2011 cursante a fs. 7, expedido por la


autoridad en cuestión, se advierte que éste fue ejecutado el 10 enero de 2012 (fs. 7 vta.), por lo
que se concluye que se trató de una detención ilegal, conforme el entendimiento expresado en el
fundamento III.2 de la presente Sentencia Constitucional.

Por otra parte, si bien es cierto que la jurisprudencia de este Tribunal ha definido que el
accionante debe agotar los mecanismos intra-procesales, idóneos y oportunos, para la protección
de su derecho a la libertad, la persecución o procesamiento indebido, que en la problemática en
cuestión, se traduce; el instituto de la recusación (arts. 316 y ss. del CPP) o; la actividad procesal
defectuosa (art. 167 CPP), no es menos evidente que exigir la utilización de estos mecanismos
previstos en el procedimiento ordinario, implica para la accionante una demora excesiva en el
tiempo dada la distancia existente entre la localidad de Caranavi y la ciudad de La Paz, y entre la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 233


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

referida localidad y el asiento judicial más próximo, sin dejar de lado demora que conlleva su
tramitación procesal, situaciones de hecho que en consecuencia, convierten a los medios
previstos en el procedimiento ordinario, dentro de la problemática planteada, en
inoportunos e ineficaces en la tutela del derecho a la libertad de la accionante; ello con
mayor fundamento si se considera que el mismo se encontraba suprimido en base a
actuaciones emanadas por una autoridad cuya imparcialidad era cuestionada y, que
teniendo la obligación legal de excusarse, no lo hizo, conforme los fundamentos jurídicos
de la presente Sentencia Constitucional.

Por los fundamentos anotados, el Juez de garantías al conceder la tutela impetrada a través de la
presente acción de libertad, obró correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: CONCEDER la tutela
solicitada.

1º.- Remítase antecedentes al Consejo de la Magistratura y al Ministerio Público, de Ramiro


Ariel Julio Blanco Fuentes, Juez de Instrucción de Coroico, a efectos de que se determine su
responsabilidad disciplinaria y penal, conforme lo expresado en los fundamento jurídicos III.2 y
III.3 de la presente Sentencia Constitucional.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0035/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00012-01-2012-AAC
Departamento: Tarija

En revisión la Resolución de 11 de enero de 2012, cursante de fs. 200 vta. a 204, pronunciada,
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Marcelo Javier Gareca Hervas
contra Sixto Velasco Vaca, Lucila Iporre Gonzales, Melania Torrico Pericón, José Luis
Morales Ruiz, Felicidad Mérida Ríos, Gladis Marcela Arce Peralta, Robert Evaristo Aban
Cruz y Manuel Alejandro Janco Morales, Concejales y ex Asesor Legal del Pleno
respectivamente del municipio de Bermejo.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 234


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Mediante memorial presentado el 4 de enero de 2012, cursante de fs. 42 a 49 y subsanado el 9 de


igual mes y año, corriente de fs. 62 a 63 vta., el accionante expone los siguientes fundamentos de
hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

En las elecciones del 4 de abril de 2010, su persona fue electo Concejal titular por el municipio de
Bermejo y Delfor Germán Burgos Aguirre, como Alcalde; empero el 20 de junio de 2011, este
último fue suspendido a consecuencia de una acusación formal en su contra, a cuya emergencia,
mediante Resolución Municipal 132/2010 de 3 de septiembre y de conformidad al art. 147 de la
Ley Marco de Autonomías y Descentralización (LMAD), el Concejo Municipal, designó al
accionante como Alcalde interino hasta la conclusión del juicio de la autoridad suspendida.

El 20 de junio de 2011, el Alcalde suspendido presentó oficialmente su renuncia ante el Presidente


y Pleno del Concejo; consiguientemente en sesión extraordinaria 08/2011 de 24 de junio, se dió
lectura de la renuncia presentada y al informe legal 23/2011, el cual recomendó se acepte la
renuncia y se elija al nuevo Alcalde de entre los miembros del Concejo Municipal, es así por
unanimidad se aceptó la renuncia y por mayoría de cuatro votos se decidió la elección de la nueva
Autoridad edil, designándose a Lucila Iporre Gonzales como “Alcaldesa Titular Transitoria”,
según Resolución Municipal 60/2011 de la misma fecha, hasta la posesión del nuevo alcalde electo
por voto popular y por último, se abrogó y derogó cualquier Resolución o parte de ella que resulte
contraria a la dictada en esa oportunidad.

Frente a la ilegalidad de dejar sin efecto la Resolución Municipal 132/2010, el 27 de junio de 2011,
el accionante interpuso reconsideración; empero, mediante nota HCM OF. 708/2011 de 18 de julio,
se le hizo conocer que su solicitud fue tratada en la sesión ordinaria 27/2011 de 13 de julio y no se
resolvió ante la inexistencia de dos tercios para su consideración, teniéndose por rechazada.
A través de la Resolución Municipal 60/2011, se incurrió en un acto ilegal e indebido,
conculcándose parcialmente la disposición contenida en el art. 147 de la LMAD, dado que Delfor
Germán Burgos Aguirre, no cuenta con sentencia ejecutoriada. El Concejo Municipal no tenía ni
tiene competencia para removerlo de su cargo y designar una “Alcaldesa Titular Transitoria”, dado
que debió aceptar la renuncia y poner en conocimiento del Tribunal Electoral para que convoque a
elecciones y no elegir a otro interino en razón a que la Resolución Municipal 132/2010, se
encuentra vigente; dicho acto vulneró lo prescrito en el art. 286.II de la Constitución Política del
Estado (CPE). Agrega, si la renuncia del titular suspendido, tuvo lugar antes de la conclusión del
juicio, el interino debe permanecer en el cargo hasta la elección y posesión de la autoridad elegida
democráticamente y al no existir la misma, hasta la conclusión del juicio; armonizándose de esta
manera los arts. 147 de la LMAD y 286.II de la CPE. En ninguna parte de la Ley Marco de
Autonomías y Descentralización u otra ley, se autoriza al concejo municipal a designar dos o más
autoridades interinas y de admitirse se generaría un caos permanente.

Refiere, que en el informe legal 23 de 24 de junio de 2011, se incurrió en recomendaciones


ilegales, contradictorias e incongruentes, al señalar que de acuerdo al Artículo Segundo de la
Resolución Municipal 132/2010, su mandato como interino se cumplió, omitiendo considerar que
el reemplazo temporal es hasta la conclusión del juicio de la autoridad suspendida; y se someta a
elección de una nueva autoridad entre los miembros electos del concejo municipal, olvidando que
debe realizarse a través de una elección popular convocada por el órgano electoral.

La última decisión administrativa del Concejo Municipal, le fue comunicada el 18 de julio de


2011, por cuanto se encuentra dentro del plazo para interponer la presente acción, invocando al
efecto las SSCC 1284/2006-R, 0883/2006-R y los a AACC 0157/2011-RCA y 0018/2011-RCA.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 235


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Refiere haber interpuesto una acción de cumplimiento; empero, efectúo el retiro del Tribunal
Constitucional Plurinacional, sin que se hubiere ingresado al análisis de fondo.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la “seguridad jurídica” y al ejercicio de la


función pública, citando al efecto el art. 26.I de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción: a) Declarando la nulidad parcial de la Resolución Municipal 60/2011


de 24 de junio, dictada en sesión extraordinaria 08/2011 de la misma fecha, debiendo quedar
vigente sólo la aceptación de la renuncia del Alcalde, Delfor Germán Burgos Aguirre; b) Se
disponga la restitución inmediata a su cargo como Alcalde Municipal interino de Bermejo; c) Se
declare vigente la Resolución Municipal 132/2010 y sea bajo expresa conminatoria de darse
aplicación a los arts. 127 y 129.V de la CPE, en caso de resistencia; y, d) Se condene en costas
procesales.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 11 de enero de 2012, en presencia del accionante y los


demandados acompañados de sus respectivos abogados; no consta la concurrencia del
representante del Ministerio Público, según acta cursante de fs. 196 a 200, se produjeron los
siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, ratificó in extenso el contenido de la acción de amparo constitucional y


lo amplió, indicando: 1) Los Concejales, Gladis Marcela Arce Peralta, Robert Evaristo Aban Cruz,
votaron por abstenerse, fundamentando su petición en no incurrir en un acto ilegal; la Presidencia
se abstuvo de votar y deliberar, actos que vulneraron las garantías a la “seguridad jurídica” y a la
“función pública”; 2) Si bien, el Concejo Municipal tiene la potestad para derogar una ordenanza
municipal, ello no implica violar la Ley Fundamental; 3) Sixto Velasco Vaca, Presidente del
Concejo Municipal, planteó una acción de amparo constitucional contra Gladis Marcela Arce
Peralta, José Luis Morales Ruiz, Melania Torrico Pericón, Robert Evaristo Aban Cruz, Felicidad
Mérida Ríos, por haber dictado la Resolución Municipal 060/2011; 4) La acción, está dirigida
contra los concejales Sixto Velásquez Vaca, Lucila Iporre Gonzales, Melania Torrico Pericón, José
Luis Morales Ruiz, Felicidad Mérida Ríos y Manuel Alejandro Janco Morales y no contra Gladis
Marcela Arce Peralta y Robert Evaristo Aban Cruz, por haberse abstenido en quebrantar la ley; y,
5) Reiteró su petitorio.

I.2.2. Informe de las autoridades y funcionario demandados

Robert Evaristo Aban Cruz, Gladis Marcela Arce Peralta, Concejales Municipales, codemandados,
no presentaron informe escrito y en audiencia, por intermedio de su abogado manifestaron: I) De
los antecedentes se evidencia que antes de admitir la presente acción, mediante decreto de 6 de
enero de 2012, se concedió al accionante el plazo de setenta y dos horas para que aclare su
demanda; omitiendo considerar los AACC 0001/2010-CA y “1419/2003”, relativos a que el
término para subsanar la observación es de cuarenta y ocho horas, bajo alternativa de rechazar y
declarar su improcedencia, lo que no sucedió en el caso concreto; II) Los argumentos y petición de
esta acción de defensa fueron utilizados en la acción de cumplimiento interpuesta en Entre Ríos; y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 236


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la Resolución dictada en esa localidad, estableció la legalidad de la Resolución Municipal


060/2011 y que los concejales se encuentran facultados para realizar el cambio de autoridad; III)
La Ley del Tribunal Constitucional y la jurisprudencia, establecen que previo a activar la acción de
amparo constitucional, se debe agotar la vía administrativa a través del recurso de reconsideración;
el accionante lo planteó y solicitó se deje sin efecto la Resolución Municipal 060/2011 y ahora pide
que sea parcial, lo que constituye en actos consentidos; IV) El concejal Marcelo Javier Gareca
Hervas, después de la designación de Lucila Iporre Gonzales, pidió licencia de su cargo, lo que
implica reconocimiento como Alcaldesa. El 22 de octubre de 2011, solicitó licencia por segunda
vez, bajo el argumento de encontrarse enfermo, reconociendo y consintiendo nuevamente a la
indicada Autoridad; V) El “art. 96.2” de la Ley del Tribunal Constitucional abrogada (LTCabrg),
dispone que los actos consentidos son una causal de improcedencia, cuando se interpuso otro
recurso con los mismos hechos y distinto petitorio; así se pronunciaron las SSCC 0906/2010-R,
0231/2010-R y 01697/2004-R, 0733/2010-R y 095/2010-R; y VI) Solicitó, que de no admitirse la
improcedencia por el plazo para subsanar la demanda, se deniegue la acción por existir una carta
en la que se consintió la titularidad de la Alcaldesa Lucila Iporre Gonzales, a quien pidió licencia
indefinida para sesionar en el Concejo.

Manuel Alejandro Janco Morales, ex Asesor Legal del Pleno del Concejo Municipal de Bermejo,
codemandado, no presentó informe escrito y en audiencia, informó: a) El plazo de seis meses, para
presentar la acción de amparo constitucional contra su persona ya feneció, dado que no hubo
ningún medio de impugnación contra el informe cuestionado; y, b) El informe que hace referencia
al recurso de reconsideración, no contiene fundamentación legal, ni petitorio alguno respecto de la
nulidad o anulabilidad de la Resolución Municipal 60/2011.

Sixto Velasco Vaca, Lucila Iporre González, Melania Torrico Pericón, José Luis Morales Ruiz,
Felicidad Mérida Ríos Concejales Municipales y Manuel Alejandro Janco Morales, ex Asesor
Legal, codemandados, no presentaron informe escrito pero en audiencia, a través de su abogado,
indicaron: 1) La presente acción, es viable, cuando no existe otro recurso, según establece el art.
129 de la CPE. En el caso concreto no se agotó la vía administrativa; 2) La acción debió ser
declarada improcedente, por no haber sido dirigida contra el Concejo Municipal, que dictó la
Resolución Municipal 060/2011, de conformidad con el art. 128 de la Ley Fundamental; 3) Lucila
Iporre Gonzales, fue demanda como Concejal y no como Alcaldesa y el “art. 77 de la LTC”,
establece que se deberá demandar al tercero interesado; 4) A la renuncia de Delfor Germán Burgos
Aguirre, se designaron a dos alcaldes interinos, no existiendo ningún impedimento legal para dicho
nombramiento; el primero como interino y la segunda titular transitoria; 5) El Concejo Municipal
no tenía competencia para designar otro alcalde interino, dado que el art. 122 de la CPE, establece
la nulidad de los actos ejercidos por personas que ejerzan funciones que no les competen y el “art.
157 de la LTC”, dispone que la nulidad procede contra todo acto o resolución de quien usurpe
funciones que no les competen; consecuentemente, debió plantear recurso directo de nulidad en el
plazo de seis meses, el cual ya caducó; 6) La presente acción, es una repetición de la acción de
cumplimiento interpuesta por el accionante en la localidad de Entre Ríos; 7) El 23 de junio de
2011, en el periódico “Bermejeño”, Marcelo Javier Gareca Hervas, manifestó que ante la renuncia
del Alcalde suspendido, el Concejo debió sesionar y designar una nueva autoridad de entre los
Concejales y que sería respetuoso de la decisión; 8) En la reconsideración, planteada por el
accionante nunca pidió la nulidad de las Resoluciones Municipales 60/2011 y 132/2010, por
cuanto, lo que no se puso como agravio en dicho “recurso”, no puede invocarse ahora, dado que
implica que consintió los actos que no impugnó oportunamente; 9) Manuel Alejandro Janco
Morales, no es concejal y no dictó resolución alguna, en el petitorio el accionante no solicita se
deje sin efecto el informe legal; 10) El art. 178 de la CPE, no reconoce a la seguridad jurídica como
un derecho, sino como un principio; el art. 3 inc. 4) de la “CPE”, establece que la seguridad
jurídica es la aplicación objetiva de la ley, en ese sentido se pronunció la SC “1385/2011”; 11) Para

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 237


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

exigir el cumplimiento del art. 147 de la LMAD, debió plantearse una acción de cumplimiento; 12)
La acción debió interponerse contra las autoridades que supuestamente vulneraron derechos y no
contra los Concejales que no votaron en la sesión; 13) Adjuntó como prueba, las cartas presentadas
por el arquitecto Marcelo Javier Gareca Hervas, que acreditan la existencia de actos libremente
consentidos, reconociendo a Lucila Iporre Gonzales como Alcaldesa; y, 14) Solicitó se deniegue la
acción con imposición de costas, multas y la extensión de fotocopias legalizadas de la sentencia.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez Primero de Partido Mixto y Sentencia de Bermejo del Distrito
Judicial de Tarija, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución de 11 de enero de
2012, cursante de fs. 200 vta. a 204, concedió parcialmente la acción, por lo que anuló la “RM
27/2011 de 13 de julio” (sic), en cuanto ratifica la Resolución Municipal 60/2011, disponiendo
que la Directiva del Concejo Municipal, en forma inmediata convoquen a sesión donde se trate la
solicitud de reconsideración presentada por el accionante y pronuncien resolución debidamente
fundamentada y motivada, sin costas ni multa; y, denegó la acción respecto de Manuel Alejandro
Janco Morales, con costas; con los siguientes fundamentos: a) La naturaleza jurídica y la finalidad
de la acción de amparo constitucional es la protección de los derechos consagrados en la carta
magna y su restablecimiento de manera inmediata y efectiva; b) En la sesión ordinaria 27/2011 de
13 de julio, se dio lectura a la petición de reconsideración y al informe del Asesor Legal del
Concejo Municipal; ante la inexistencia de los dos tercios para su tratamiento, se ratificó la
decisión tomada en la Resolución Municipal 60/2011; c) La reconsideración prevista por el art. 22
de la Ley de Municipalidades (LM), dispone que el Concejo, a instancia de parte o del alcalde, por
el voto de dos tercios del total de sus miembros, podrá reconsiderar las ordenanzas o resoluciones
municipales. Como mecanismo de impugnación de acuerdo a la SC “031 del año 2006” (sic), tiene
por finalidad disponer la modificación o anulación, siempre y cuando exista el voto de dos tercios
de los concejales que apoyen la decisión. Dicha disposición legal, debe entenderse como el quórum
necesario para modificar o dejar sin efecto la resolución del concejo; d) Quienes votaron por la no
reconsideración, también votaron a favor de la Resolución Municipal 60/2011, existiendo tres
abstenciones lo que implica que no hubo discusión o debate, en ese sentido se pronunció la SC
0723/2010-R de 26 de julio; e) Emergente de la errónea interpretación de los alcances del citado
mecanismo legal, el Concejo Municipal, no cumplió con el tratamiento de la reconsideración
planteada por el accionante. Por cuanto, la determinación a emitirse debe ser motivada y
fundamentada a objeto de dar certeza sobre lo que se decida; f) En el caso concreto, debió darse
curso a la reconsideración, a través de su tratamiento, el debate sobre la renuncia del Alcalde
titular, considerar el tiempo de funciones, la existencia de un interino y si corresponde o no el
nombramiento una nueva autoridad ejecutiva, basados en la Constitución Política del Estado y la
Ley Marco de Autonomías y Descentralización; g) Mediante la acción de amparo constitucional,
no puede tratarse el incumplimiento de funciones de las autoridades demandadas, quienes deberán
emitir una resolución debidamente fundamentada y motivada, que en definitiva dará certidumbre
jurídica a los interesados y paz social a la población; y, h) Respecto de la situación del ex Asesor
Legal del Concejo, su labor se limitó a emitir un informe legal en cumplimiento a sus funciones,
quienes toman la decisión son los Concejales, por lo que su participación no se justifica.

II. CONCLUSIONES

Realizada la revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. Según credencial de 7 de mayo de 2010, expedida por la “Corte Departamental Electoral” de
Tarija, acredita que Marcelo Javier Gareca Hervas, fue electo Concejal por el municipio de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 238


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Bermejo de la provincia Arce del departamento de Tarija, en sufragio realizado el 4 de abril de


igual año (fs. 2).

II.2. Mediante Resolución Municipal 132/2010 de 3 de septiembre y al amparo de los arts. 144 y
145.I de la LMAD y 12.24 de la LM, el Concejo Municipal de Bermejo, nombró al accionante
Alcalde interino, temporalmente y hasta la conclusión del juicio seguido contra la autoridad
suspendida. En sesión extraordinaria 16/2010 de la misma fecha, fue posesionado en el indicado
cargo por el Presidente de dicho órgano deliberante (fs. 4 a 9).

II.3. Según oficio de 20 de junio de 2011, dirigido a Sixto Velasco Vaca, Presidente del Concejo
Municipal de Bermejo, Delfor Germán Burgos Aguirre, Alcalde suspendido, presentó su renuncia
al cargo (fs. 10 a 11).

II.4. Manuel Alejandro Janco Morales, ex Asesor Legal del Pleno del Concejo Municipal, emitió
el informe legal 23 de 24 de junio de 2011, recomendando, se acepte la renuncia de Delfor Germán
Burgos Aguirre, recomendado la elección del nuevo alcalde de entre los miembros electos por voto
popular del Concejo Municipal, hasta la elección de una nueva autoridad electa por voto popular a
convocatoria del órgano electoral; y se proceda a la elaboración de la resolución por parte de la
directiva de dicho ente (fs. 12 a 14).

II.5. En sesión extraordinaria 08/2011 de 24 de junio, con el quórum de siete Concejales, y con el
voto de Lucila Iporre Gonzales, Melania Torrico Pericón, Felicidad Mérida Ríos, José Luis
Morales Ruíz y la abstención de Gladis Marcela Arce Peralta y Robert Evaristo Aban Cruz, el
Concejo Municipal dictó la Resolución Municipal 60/2011, nombrando a Lucila Iporre Gonzales,
“Alcaldesa Titular Transitoria” hasta la posesión de la nueva autoridad elegida por voto popular a
convocatoria del órgano electoral plurinacional (fs. 15 a 18). En el primer considerando de la citada
Resolución, refiere que aceptada la renuncia de Delfor Germán Burgos Aguirre, así como que se
abrogó y derogó cualquier resolución o parte de ella que resulte contraria (fs. 19 a 20).

II.6. Por memorial presentado el 27 de junio de 2011, el accionante solicitó al Concejo Municipal
la reconsideración de la Resolución Municipal 60/2011 y que ésta se deje sin efecto. En memorial
de 29 de igual mes y año, pidió que la misma fuera tratada en sesión fijada para esa fecha, previa la
verificación de la existencia de dos tercios que establece el art. 22 de la LM, solicitud reiterada el 1
de julio de ese año (fs. 21 a 24).

En respuesta a las solicitudes del accionante, el Concejo Municipal, mediante oficio HCM Of.
664/2011 informó que previo a resolver su petición se realizaría un informe legal, el mismo que,
emitido el 12 de julio de 2011, se recomendó que se verifique la existencia de dos tercios de los
miembros del Concejo para la reconsideración y así como para modificar la Resolución (fs. 25 a
27).

II.7. En sesión ordinaria 27/2011 de 13 de julio, el Concejo Municipal sometió a votación la


reconsideración de la Resolución Municipal 60/2011, determinándose que, no existiendo los dos
tercios para su tratamiento se ratificó la misma. Mediante oficio HCM Of. 708/2011, se comunicó
a Marcelo Javier Gareca Hervas que ante la ausencia de dos tercios para la reconsideración, “se
entiende por rechazada su solicitud”, nota recibida por Víctor Aricoma, el 18 del mismo mes y año
(fs. 28 a 32).

II.8. Mediante nota de 16 de agosto de 2011, el accionante, solicitó al Presidente del Concejo
Municipal, licencia por quince días calendario. El 26 de octubre de igual año, ante la misma

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 239


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

autoridad, pidió licencia indefinida a su cargo de Concejal titular y comunicó que por motivos de
salud no asistiría, ni participaría de las sesiones de ese órgano (fs. 176 a 177).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la “seguridad Jurídica” y al ejercicio de la


función pública, por cuanto las autoridades recurridas mediante RM 60/2011 de 24 de junio, a
tiempo de aceptar la renuncia del Alcalde -que se encontraba suspendido por existir una
acusación penal en su contra- designó Alcaldesa “Titular Interina” a Lucila Iporre Gonzales,
derogando y abrogando cualquier resolución aparte de ella que resulta contraria a la emitida en
esa fecha, refiriéndose implícitamente a la RM 132/2010 de 3 de septiembre, mediante la cual se
le designa a él como “Alcalde Transitorio”, hasta la conclusión del juicio al que estaba sometido
el Alcalde Titular. Además, porque en la Sesión 27/2011 de 13 de julio, de acuerdo al oficio
708/2011 de 14 de julio, el Concejo Municipal asumió que como no hubo dos tercios para la
reconsideración de la RM 60/2011, la RM 132/2010 quedo ratificada, por lo que, en revisión,
corresponde dilucidar si los hechos expuestos por el accionantes son evidentes y si estos
constituyen actos que lesionan los derechos invocados por el accionante.

III.1. De la acción de amparo constitucional

Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la presente acción


tutelar elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a dicha la
acción de amparo constitucional instituida en el Sistema Constitucional boliviano; así, la
Constitución Política del Estado, en la Sección II, del Capítulo segundo (Acciones de Defensa)
del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte (Bases
fundamentales del Estado - derechos, deberes y garantías) ha instituido la acción de amparo
constitucional.

En ese marco, el art. 128 establece: “La Acción de Amparo Constitucional tendrá lugar contra
actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley”; a su vez el art. 129.I de la CPE, determina que: “La Acción de
Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre
con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante
cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la
protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados”.

En desarrollo de las normas constitucionales citadas, el art. 73 de la Ley Nº 027, del Tribunal
Constitucional Plurinacional, de 6 de Julio de 2010, al referirse al objeto de de la acción de
amparo constitucional, “(…)tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los
servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen
restringir o suprimir los derechos y garantías reconocidos por la Constitución Política del Estado
y la ley” y que, al referirse el art. 76 de la citada Ley, con referencia a la subsidiariedad e
inmediatez, “La Acción de Amparo no procederá cuando exista otro medio o recurso legal para
la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados”.

La acción de amparo constitucional, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que


la Ley suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección cuyo objeto
es el restablecimiento inmediato y efectivo de los derechos y garantías restringidos, suprimidos
o amenazados, a través de un procedimiento judicial sencillo, rápido y expedito, frente a
situaciones de lesión provenientes de la acción u omisión de servidores públicos o particulares;

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 240


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para
reparar la lesión producida.

III.2. Sobre la interposición de una nueva acción de defensa cuando la primera no ingresó al
análisis de fondo de la problemática.

Por otra parte, resulta pertinente recordar que los pronunciamientos del Órgano de control de
constitucionalidad, han sido han sido uniformes al establecer que ante la interposición de una
garantía jurisdiccional en la que se advierta la existencia de defectos formales y/o de contenido
que dieren lugar a su rechazo o sucediere que con posterioridad a su admisión se observare la
existencia de una causal que impida su análisis de fondo y se denegare la tutela invocada, no
existe impedimento para que la acción pueda ser planteada nuevamente en razón a no haberse
efectuado un pronunciamiento de fondo sobre la misma.

En el caso de examen, el accionante planteó una acción de cumplimiento previo a la


interposición de la presente garantía jurisdiccional; empero, ello no constituye obstáculo para
activar nuevamente esta jurisdicción a través de la acción de amparo constitucional, dado que en
la primera acción, el Juez de garantías no ingresó al análisis de fondo de la problemática y en
esta instancia se produjo el retiro de la misma, aclarándose que no se emitió pronunciamiento
alguno. Realizada esa precisión y no existiendo causal que impida el examen de fondo del
problema jurídico en cuestión se realizará dicho análisis.

III.3. Del “Derecho a la seguridad jurídica” y al “ejercicio de la función pública”.

Igualmente, corresponde referirse a los derechos presuntamente vulnerados que fueron


invocados por el accionante. Al efecto, cabe puntualizar que la seguridad jurídica constituye un
principio que sustenta la potestad de impartir justicia, tal cual señala el art. 178 de la Norma
suprema del ordenamiento jurídico que, de acuerdo con la jurisprudencia constitucional implica:
“'…la protección constitucional de la actuación arbitraria estatal; por lo tanto, la relación Estado-
ciudadano (a) debe sujetarse a reglas claras, precisas y determinadas, en especial a las leyes, que
deben desarrollar los mandatos de la Constitución Política del Estado, buscando en su contenido
la materialización de los derechos y garantías fundamentales previstos en la Ley Fundamental,
es decir, que sea previsible para la sociedad la actuación estatal(…)”. En ese sentido, entre otras,
la SC 0070/2010-R de 3 de mayo.

De hecho, por otra parte, los derechos fundamentales son derechos subjetivos que corresponden
a las personas o a los pueblos y naciones indígena originario campesinos, los mismos que,
cuando son lesionados, implícitamente afectan la seguridad jurídica, vista como un todo, como
aquello que resulta ser inherente al sistema de justicia.

Dicho lo anterior, debe tenerse presente que la acción de amparo constitucional resguarda y
protege los derechos constitucionales.

En cuanto al ejercicio de la función pública el art. 144. II. de la CPE establece que “La
ciudadanía consiste: 1. En concurrir como elector o elegible a la formación y al ejercicio de
funciones en los órganos del poder público, y En el derecho a ejercer funciones públicas sin otro
requisito que la idoneidad, salvo las excepciones establecidas en la Ley”.

Al respeto, el precedente constitucional expuesto en la SC 0377/2011-R de 7 de abril, señala con


referencia a los dos numerales citados: “el primero, consistente en el derecho de concurrir como
elector o como elegible a la formación y el segundo relativo al ejercicio de funciones en los

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 241


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

órganos del poder público, sin otro requisito que la idoneidad, salvo las excepciones
establecidas por ley”.

De la misma manera, la SC 0980/2010-R de 17 de agosto, explica que: “(…)En ese contexto, el


segundo elemento deviene del primero; es decir, que por efecto del derecho a ser elegido o
designado previo cumplimiento de los requisitos que acrediten la idoneidad y los
procedimientos democráticos, conlleva el derecho a ejercer materialmente el cargo en la
función pública para el que fue electo que satisfaga sus necesidades económicas y laborales.
La interrupción o impedimento de funciones al servidor público electo, implica afectar el
normal desarrollo de su derecho a ejercer la función pública y al trabajo“ (las negrillas y
subrayado son nuestros).

III.4. Análisis del caso concreto

De la documentación que informa los antecedentes del expediente, se evidencia que ante la
renuncia del Alcalde Titular, el Concejo Municipal de Bermejo, previo informe del Asesor
Legal, aceptó la renuncia mencionada, y procedió a designar como Alcaldesa a Lucila Iporre
Gonzales, abrogando y derogando las resoluciones o parte de ellas que sean contrarias;
determinación que, conforme fue señalado en el punto precedente, no puede considerarse que
afecta al accionado por cuanto éste no ha perdido su calidad de de Concejal, cargo para el cual
fue electo democráticamente. Téngase presente, solo a mayor abundamiento, que el Concejo
Municipal al decidir aceptar la renuncia del Alcalde Titular y nombrar a quien le reemplace por
causa de su renuncia, plantea como hecho, que la última designación difiere en la causa que dio
origen a la designación de su predecesor; es decir, en el primer caso tratábase de una
designación por causa de una acusación penal contra el Alcalde titular, en cambio, la última
determinación presenta una realidad distinta al marco legal que regula los casos en los que hay
una acción penal, pues, en este caso, el titular del Ejecutivo Municipal renunció y en
consecuencia, el Concejo Municipal debía proceder a una nueva elección, puesto que, en caso
de renuncia o muerte, inhabilidad permanente o revocatoria de la máxima autoridad
ejecutiva de un gobierno autónomo, por mandato constitucional, debe proceder a una nueva
elección.

Por otra parte, igualmente a manera de aclaración, en cuanto al recurso de reconsideración por
parte del Concejo Municipal, corresponde señalar que para la tramitación de toda
reconsideración, se requiere, en primer lugar, que se apruebe la posibilidad de reexaminar,
modificar o no la resolución aprobada e impugnada; solo en caso de darse tal presupuesto
procede el examen de fondo de la solicitud impetrada. En todo caso, para que se lleve adelante
una sesión de Concejo solo se exige que tenga el quórum exigido por la norma; no obstante para
la aprobación o viabilidad de la reconsideración, necesariamente se exige que éste sea aprobada
por dos tercios de los presentes, exigencia que resulta independiente del requerimiento para la
conformación del quórum para instalar una sesión.

Por los fundamentos expuestos, el Juez de garantías, al haber concedido en forma parcial la
tutela invocada, obró incorrectamente, debiendo haber denegado la misma en todas sus partes.

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución de 11 de
enero de 2012, cursante de fs. 200 vta. a 204, pronunciada por el Juez Primero de Partido y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 242


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Sentencia de Bermejo del Tribunal Departamental de Justicia de Tarija, en consecuencia


DENEGAR y en todas sus partes la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0036/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de cumplimiento:
Expediente: 00062-2012-01-ACU
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 02/12 de 28 de enero de 2012, cursante de fs. 25 a 26 vta.,


pronunciada dentro de la acción de cumplimiento interpuesto por Germán Rivero Talamás
contra Walter Vaca Méndez, Responsable del Servicio General de Identificación Personal
(SEGIP) Riberalta.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 25 de enero de 2012, cursante de fs. 19 a 23., el accionante expone
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Con la finalidad de renovar la cédula de identidad, el 4 de enero de 2012 se apersonó a las


oficinas del SEGIP llevando consigo certificado de nacimiento original y extracto “colita”
expedido por el Registro Civil y una fotocopia simple de su cédula de identidad sustraída,
petición rechazada en principio por ventanilla de trámites, con la explicación que su certificado
de nacimiento “no estaba impreso en computadora” y que posteriormente fue confirmada por el
responsable de SEGIP, manifestando que cumplían con las instrucciones expresas de la oficina
nacional.

Ante la inacción de extensión de la cédula de identidad solicitada, reitero su pedido,


dictaminándóse que dicha solicitud sería derivada a la ciudad de Trinidad, a efecto de una
respuesta formal.

No obstante que en tres oportunidades se apersonó ante dicha oficina, para recabar su cédula de
identidad, no obtuvo ninguna respuesta, lo que derivó para que el accionante el 11 de enero de
2012, presentara una queja formal ante la Defensoría del Pueblo de Riberalta, que a la fecha,
tampoco obtuvo una solución o negativa fundamentada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 243


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Normas supuestamente incumplidas

El accionante considera “la vulneración a su derecho de petición, citando al efecto el art. 24 de la


Constitución Política del Estado (CPE).”

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, disponiendo se le dé respuesta formal y fundamentada a la petición


efectuada.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 28 de enero de 2012, -erróneamente señalado el 30 de enero


del año igual, según consta en el acta de audiencia de acción de cumplimiento, cursante a fs. 25
y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante, ratificó el contenido íntegro de la acción de cumplimiento.

I.2.2. Informe del funcionario demandado

No obstante su legal notificación conforme consta a fs. 24, el demandado no presentó informe ni
se apersonó a la audiencia programada.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, Mario Guillermo Centella Leigue, Juez de Trabajo y Seguridad Social
de Riberalta del Tribunal Departamental de Justicia del Beni, constituido en Juez de garantías,
mediante la Resolución 02/12, declaró procedente la acción de cumplimiento, disponiendo que
el servidor público representante del SEGIP- Walter Vaca Méndez, en el termino de 48 horas de
una respuesta final y efectiva a la solicitud del ciudadano Germán Rivero Talamás, bajo
conminatoria en caso de incumplimiento, remitir antecedentes al Ministerio Público para su
procesamiento correspondiente, con los siguientes fundamentos: a) El accionante puede acudir
al órgano jurisdiccional cuando cree que sus derechos hayan sido conculcados; b) La
inasistencia a audiencia pública implica una aceptación tácita de todos los argumentos del
accionante; c) Que las autoridades jurisdiccionales en esta clase de procesos extraordinarios
tienen la potestad para obligar al funcionario administrativo negligente, indolente o renuente,
que cumplan y otorgue una eficaz respuesta a las solicitudes; d) Que el accionante se encuentra
en la imposibilidad de acudir a otra autoridad que solucione su problema de falta de cédula de
identidad o una respuesta final sobre el particular.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Mediante nota de 4 de enero de 2011, el accionante reiteró su solicitud de renovación de


cédula de identidad, al responsable del SEGIP-Riberalta (fs. 12 a 13).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 244


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. A través de la nota de 11 de enero de 2012, el accionante formuló queja escrita ante la
Defensoría del Pueblo de esa localidad (fs. 17 a 18).

II.3. Mediante memorial de acción de cumplimiento presentado el 25 de enero de 2012, el


accionante manifiesta la vulneración a su derecho de petición y solicita una respuesta formal y
fundamentada por la autoridad demandada (fs. 19 a 23).

III. FUNDAMENTOS JURIDICOS DEL FALLO

El accionante manifiesta que el responsable del SEGIP-Riberalta vulneró su derecho de petición,


toda vez que, no obstante de haber solicitado en reiteradas oportunidades la renovación de su
cédula de identidad, la autoridad accionada en ningún momento formuló respuesta a lo
impetrado. Consiguientemente, corresponde analizar en revisión sí los hechos denunciados son
evidentes, con la finalidad de otorgar o no la tutela solicitada.

III.1. Carácter tutelar de la acción de cumplimiento

Antes de ingresar al análisis del presente caso, cabe hacer referencia a la SC 0258/2011-R de 16
de marzo, cuando en sus fundamentos jurídicos III.1.5 ha referido que:

“Lo señalado no significa que la acción de cumplimiento, de manera directa o indirecta, no


tutela derechos y garantías; sino que su propósito concreto es garantizar el cumplimiento de
deberes previstos en la Constitución y las leyes, sin perjuicio que, la omisión del deber -
constitucional o legal- se encuentre indisolublemente ligado al ejercicio -y por ende lesión- de
derechos.

Si se asume dicha afirmación, corresponde establecer cuál es la diferencia existente entre el


amparo constitucional por omisión y la acción de cumplimiento, considerando que la primera,
de acuerdo al art. 128 de la CPE, procede contra actos ilegales u omisiones ilegales o
indebidas y la segunda, procede ante el incumplimiento de disposiciones constitucionales o
legales, que constituyen precisamente una omisión.

Para establecer una diferenciación, debe partirse del ámbito de protección de la acción de
cumplimiento, cual es garantizar la materialización de un deber omitido; que tiene que estar de
manera expresa y en forma específica previsto en la norma constitucional o legal. En ese
entendido, el deber al que hace referencia la norma constitucional, no es genérico -como el
cumplimiento de la ley- sino un deber concreto, que pueda ser exigido de manera cierta e
indubitable a los servidores públicos; es decir, el deber tiene que derivar de un mandato
específico y determinado y debe predicarse de una entidad concreta competente; ese es el
sentido que, por otra parte, le ha otorgado al deber omitido la Corte Constitucional de
Colombia en la Sentencia C-651/03 y el Tribunal Constitucional peruano que ha establecido
determinados requisitos para que se ordene el cumplimiento del deber omitido: mandato
vigente, cierto y claro, no estar sujeto a controversia compleja ni a interpretaciones dispares,
deber ser ineludible, de obligatorio cumplimiento y ser incondicional.
Conforme a lo anotado, ante la omisión en el cumplimiento de un deber claro, expreso y
exigible, que puede estar directa o indirectamente vinculado a la lesión de derechos
fundamentales o garantías constitucionales, corresponde invocar la acción de cumplimiento; en
tanto que si el deber omitido no reúne las características anotadas, sino que se trata de un
deber genérico, pero vinculado a la lesión de derechos o garantías fundamentales -como por
ejemplo el deber de motivación de las resoluciones cuyo incumplimiento general lesiona al

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 245


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

debido proceso- corresponde la formulación de la acción de amparo constitucional por


omisión.

III.2 El Derecho de petición: Su contenido, alcance y requisitos para su protección de


acuerdo a la Constitución y a la jurisprudencia constitucional

Con carácter previo, es menester referirse a la SC 0119/2011-R de 21 de febrero, que en sus


fundamentos jurídicos III.1, ha señalado que: “III.1. El derecho de petición: Su contenido,
alcance y requisitos para su protección de acuerdo a la Constitución y la jurisprudencia
Constitucional.

Por otro lado, también forma parte del contenido del derecho de petición la respuesta material
a la solicitud, conforme lo estableció la SC 1159/2003-R de 19 de agosto, al señalar que: …el
derecho de petición se encuentra satisfecho no únicamente por una respuesta emitida por la
autoridad, sino una vez que dicha autoridad haya resuelto o proporcionado una solución
material y sustantiva al problema planteado en la petición, sin que se limite a una consecuencia
meramente formal y procedimental.

Asimismo, la SC 0843/2002-R de 19 de julio, ha establecido: …que la exigencia de la autoridad


pública de resolver prontamente las peticiones de los administrados, no queda satisfecha con
una mera comunicación verbal, sino que es necesario que el peticionante obtenga una respuesta
formal y escrita, que debe ser necesariamente comunicada o notificada, a efecto de que la parte
interesada, si considera conveniente, realice los reclamos y utilice los recursos previstos por
Ley.

Por otra parte, en cuanto a los requisitos para que se otorgue la tutela por lesión al derecho de
petición, la SC 0310/2004-R de 10 de marzo, sistematizó los criterios señalados por la
jurisprudencia del Tribunal Constitucional, conforme al siguiente texto: '…a fin de que se
otorgue la tutela en caso de alegarse la violación del derecho a formular peticiones,
corresponde que el recurrente, demuestre los siguientes hechos: a) la formulación de una
solicitud expresa en forma escrita; b) que la misma hubiera sido formulada ante una autoridad
pertinente o competente; c) que exista una falta de respuesta en un tiempo razonable y d) se
haya exigido la respuesta y agotado las vías o instancias idóneas de esa petición ante la
autoridad recurrida y no existan otras vías para lograr la pretensión.'

La jurisprudencia citada precedentemente fue modulada a partir del nuevo contenido del
derecho de petición, conforme a la SC 1995/2010-R de 26 de octubre, que establece que: …a la
luz de la Constitución vigente, y conforme a lo expresado, corresponde modular la
jurisprudencia citada precedentemente, pues actualmente, el primer requisito señalado por
dicha Sentencia, es decir, la formulación de una solicitud en forma escrita no es exigible, pues
la Constitución expresamente establece que la petición puede ser escrita u oral.

Con relación al segundo requisito que establece que la solicitud debe ser presentada ante
autoridad competente o pertinente, se debe precisar que ésta no es una exigencia del derecho de
petición, pues aún cuando la solicitud se presente ante una autoridad incompetente, ésta tiene la
obligación de responder formal y oportunamente sobre su incompetencia, señalando, en su
caso, a la autoridad ante quien debe dirigirse el peticionario; conclusión a la que se arriba por
el carácter informal del derecho a la petición contenido en la Constitución Política del Estado,
que exige como único requisito la identificación del peticionario, y en la necesidad que el
ciudadano, encuentre respuesta y orientación respecto a su solicitud, en un clara búsqueda por
acercar al administrado con el Estado, otorgándole a aquél un medio idóneo para obtener la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 246


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

respuesta buscada o, en su caso, la información sobre las autoridades ante quienes debe acudir,
lo que indudablemente, fortalece el carácter democrático del Estado Boliviano.

En ese entendido, cuando la petición es dirigida a un servidor público, éste debe orientar su
actuación en los principios contemplados en el art. 232 de la CPE, entre otros, el principio de
compromiso e interés social, eficiencia, calidad, calidez y responsabilidad.

Respecto al tercer requisito, el mismo es compatible con el texto de la Constitución vigente,


pues sólo si en un plazo razonable, o en el plazo previsto por las normas legales -si existiese- no
se ha dado respuesta a la solicitud se tendrá por lesionado el derecho a la petición.

Finalmente, el cuarto requisito, referido a que el peticionante debe haber reclamado una
respuesta y agotado las vías o instancias idóneas de esa petición ante la autoridad recurrida,
corresponde señalar que dicho requisito es exigible cuando dichos medios de impugnación
estén previstos expresamente en el ordenamiento jurídico con dicho objetivo, es decir,
resguardar el derecho de petición; a contrario sensu, no será exigible cuando no existan esos
medios; pues, se entiende que este derecho -como se tiene señalado- busca acercar al
administrado al Estado, otorgando a la persona de un instrumento idóneo, expedito e inmediato
para acudir ante el servidor público con la finalidad de requerir su intervención en un asunto
concreto o de solicitar una determinada información o documentación que cursa en poder de
esa autoridad.

Lo señalado también se fundamenta en la naturaleza informal del derecho de petición y en el


hecho que el mismo sea un vehículo para el ejercicio de otros derechos que requieren de la
información o la documentación solicitada para su pleno ejercicio; por tal motivo, la respuesta
solicitada debe ser formal y pronta, dando respuesta material a lo solicitado ya sea en sentido
positivo o negativo, dentro de un plazo razonable.

Consecuentemente, para que la justicia constitucional ingrese al análisis de fondo de la


presunta lesión al derecho de petición, es exigible: 1. La existencia de una petición oral o
escrita; 2. La falta de respuesta material y en tiempo razonable a la solicitud y 3. La
inexistencia de medios de impugnación expresos con el objetivo de hacer efectivo el derecho de
petición”.

III.3 Análisis del caso concreto.

El accionante manifiesta que la autoridad demandada vulneró su derecho de petición, no


obstante de haber solicitado en reiteradas oportunidades sobre la renovación de su cédula de
identidad, sin respuesta alguna.

Al respecto, conforme a la jurisprudencia desarrollada precedentemente, se concluye que la


acción de cumplimiento garantiza la materialización de un deber omitido, encontrándose de
manera expresa y en forma específica en la norma constitucional o legal, ante la omisión en el
cumplimiento de un deber claro, expreso y exigible, que puede estar directa o indirectamente
vinculado a la lesión de derechos fundamentales o garantías constitucionales.

En la especie, si bien es cierto que el accionante manifiesta que el demandado no dio respuesta a
su petitorio, solicitando en consecuencia una respuesta formal y fundamentada. Empero, no
precisa el deber previsto en la norma, señalado o cuáles son las normas expresamente
incumplidas por el demandado y su exigibilidad en las mismas, que activen la jurisdicción
constitucional para brindar la tutela solicitada, limitándose señalar que no dieron respuesta a su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 247


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

petitorio, asemejando dicha inacción en una omisión indebida, -que a través de una acción de
amparo constitucional debió ser reclamada, toda vez que la acción de amparo constitucional
como ya se tiene señalado, procederá contra actos u omisiones -como en el caso presente-
ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la
Constitución Política del Estado y la ley.

Por otro lado es necesario puntualizar que, si el accionante pretende incoar la acción de
cumplimiento, con carácter previo debe verificar la inexistencia de vías administrativas o
judiciales para su eficaz protección, conforme al art. 89. 5) de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), asimismo, con relación al principio de subsidiariedad, la naturaleza de la
acción de cumplimiento, determina que previamente a su presentación, es necesario que el actor
haya solicitado el cumplimiento de la ley o leyes expresamente determinadas a la autoridad
demandada, caso contrario no se activa la jurisdicción constitucional para la tutela demandada.

En la especie, ante la falta de respuesta del demandado, el actor debió expresamente observar y
solicitar el cumplimiento de la ley que se consideran incumplidas, agotado los medios recursivos
administrativos previstos por la norma; toda vez que, en la acción de cumplimiento, conforme
señala el art. 134.II de la CPE, esta se tramitará de la misma forma la acción de amparo
constitucional, lo que la naturaleza de la acción de cumplimiento, determina que previamente a
su presentación, es necesario solicitar su cumplimiento a la autoridad demandada, agotando los
medios jurisdiccionales o administrativos existentes, para recién activar la jurisdicción
constitucional.

En suma, el Juez de Trabajo y seguridad Social, constituido en Juez de garantías, mediante la


resolución 02/12, concede la tutela: “Disponiendo de que el servidor público Represente
Regional del SEGIP Riberalta, Servicio de Identificación Personal Walter Vaca Méndez,
en el término perentorio de 48 hrs.- dé una respuesta final y efectiva a la solicitud del
ciudadano GERMAN RIVERO TALAMAS” (sic)

Al haber resuelto en la forma dispuesta, esta se adecua perfectamente a los alcances del amparo
constitucional, por haberse tutelado el derecho a la petición, toda vez que el hecho de pedir una
respuesta final y efectiva a la solicitud, se halla protegido por el art. 24 con relación al art. 129
de la CPE.

Por consiguiente, no puede ser tutelado por la vía de la acción de cumplimiento, toda vez que,
conforme a la jurisprudencia glosada y al texto constitucional, tiene por objeto hacer cumplir a
la autoridad pública, un mandato imperativo del ordenamiento jurídico, en aquellos casos que de
manera injustificada incumple o se resiste en cumplirlo; además, no debe estar sujeta a
controversia compleja ni a interpretaciones dispares, pues de los antecedentes se deduce que el
servidor público advirtió cierta controversia en el certificado de nacimiento para la otorgación de
la cedula de identidad, por otro lado, se establece que el accionante no demostró con prueba
fehaciente la renuencia de la autoridad demandada debe estar ligada obligatoriamente a cumplir
el deber omitido, más allá del escrito de la presente acción, no cumple con el art. 91.6 de la
LTCP, toda vez de que no precisa la renuencia del deber omitido por la autoridad accionada.

En consecuencia, el Juez de garantías, al declarar procedente la acción de cumplimiento, no ha


avaluado en forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al presente caso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 248


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia; y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional LTCP, resuelve:
DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0037/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00064-01-2012-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución 004/2012 de 03 de febrero, cursante de fs. 34 a 36, pronunciada dentro


de la acción de libertad, interpuesta por Iver Waldo Quilo Lozada contra Gina Luisa
Castellón Ugarte y Ever Richard Veizaga Ayala, Vocales de Sala Penal Segunda del
Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 2 de febrero de 2012, cursante de fs. 26 a 28, el accionante


expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Desde el 21 de diciembre de 2011, se encuentra detenido en el penal de San Antonio de


Cochabamba, en cumplimiento a una “orden de detención ilegal” (sic), consistente en un
mandamiento nulo de pleno derecho, dado que los datos inmersos en el mismo, no corresponden
a ningún proceso pendiente iniciado en su contra y menos guarda relación con el Auto de la
fecha señalada; mediante dicho fallo, el Juez Mixto y Liquidador de la localidad de Arque sin
una debida fundamentación sobre los hechos, actores, relación de causalidad entre los hechos y
el delito que se investiga y la intervención de cada uno de los imputados, restringió su derecho a
la libertad, no obstante que por su parte cumplió con todos los requisitos exigidos por el art.
234.1 del Código de Procedimiento Penal (CPP), incluso, acreditó suficientemente que su
persona tiene familia constituida, domicilio habitual y trabajo establecido, así como descartó los
peligros de obstaculización del proceso de investigación señalados en el art. 234.2, 3, 4, 5 y 6
del mismo cuerpo legal, habida cuenta que desde la primera actuación de la Fiscalía, nunca
obstaculizó la investigación, más al contrario, colaboró en todo lo que se le requirió y/o instruyó

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 249


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Refiere que, contra la citada Resolución, interpuso recurso de apelación incidental, que radicado
ante la Sala Penal Segunda, esta instancia emitió el Auto de Vista de 25 de enero de 2012,
mediante el cual, establecieron que el Juez a quo incurrió en la causal de nulidad prevista por los
arts. 169.3 con relación al 124 del CPP, que conlleva la nulidad del acto, por lo que resolvieron
anular la Resolución remitida en apelación por no observar el debido proceso en su elemento a
la debida fundamentación, y dispusieron que de inmediato el Juez cautelar considere y resuelva
la situación jurídica de los imputados.

Concluye señalando que, en la vía de complementación y enmienda, argumentó al Tribunal de


apelación, que constituía una incongruencia jurídica el disponer la nulidad de obrados y no
obstante ello, no librar el mandamiento de libertad, habida cuenta, que un acto nulo implica la
inexistencia del mismo; sin embargo, obtuvo como respuesta que los fundamentos de la
Resolución de alzada estaban los suficientemente expuestos de manera clara y por tanto, no ha
lugar a la solicitud impetrada, amparando su decisión en la SC 0026/2010-R de 13 de abril.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

El accionante considera lesionados sus derechos a la libertad física y de locomoción, así como la
garantía del debido proceso, citando al efecto los arts. 22, 23.I y 117.I de la Constitución Política
del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita que se “repare la violación al derecho y garantía constitucional aludidos


declarando en consecuencia procedente el presente Recurso” (sic).

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

En audiencia pública celebrada a horas 16:00 del 3 de febrero de 2012, conforme consta en el
acta cursante de fs. 32 a 33 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó los fundamentos de su memorial de demanda y los amplió,
señalando lo siguiente: a) Los Vocales codemandados, ampararon su resolución en la SC
0026/2010-R, estableciendo que no correspondía otorgar la libertad, porque este era un aspecto
que debía ser determinado por el Juez cautelar en la audiencia respectiva; y, b) Si se anularon
obrados, entonces, en los hechos, la Sentencia del a quo quedó inexistente; por ende, no podía
permanecer detenido hasta que la autoridad que en principio ordenó su detención, modifique,
cambie o anule su disposición anterior.

En uso de la réplica, añadió que, ciertamente la Sala Penal Segunda respaldó su Resolución en la
“SC 0027/2010”, sin embargo, la misma se refiere a un caso especifico sometido al Tribunal
Constitucional sobre temas de narcotráfico; entonces, no se puede solamente bajo el rótulo de
vinculante determinar la parte sustantiva o en su caso, aplicar la parte resolutiva de las
sentencias constitucionales en supuestos fácticos que no son análogos.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Gina Luisa Castellón Ugarte y Ever Richard Veizaga Ayala, Presidenta y Vocal de la Sala Penal
Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, respectivamente, ahora

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 250


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

demandados, en informe escrito cursante a fs. 31, se remitieron a los fundamentos expuestos en
el Auto de Vista de 25 de enero de 2012, a los antecedentes procesales del caso y a la
jurisprudencia constitucional sentada en la SC 0026/2010-R, que por mandato del art. 203 de la
CPE, tiene carácter vinculante y es de cumplimiento obligatorio para todos los órganos del
Estado.

I.2.3. Resolución

Mediante Resolución 004/2012 de 3 de febrero, cursante de fs. 34 a 36, el Juez Quinto de


Partido en lo Penal de Sustancias Controladas, Liquidador y de Sentencia del Tribunal
Departamental de Cochabamba, constituido en Juez de garantías, “denegó” la tutela solicitada;
con los siguientes fundamentos: 1) El Auto de Vista emitido por los Vocales demandados y
avalado por la SC 0026/2010-R, es claro cuando refiere que el Juez a quo de inmediato
programe día y hora de audiencia para conceder y resolver la situación jurídica de los
imputados; 2) En el caso de que no se hubiera pronunciado el Juez Instructor de Arque a la
brevedad posible o haber afectado de una u otra manera su derecho a la libertad, recién pudo
haber accionado el recurso de acción de libertad; 3) La SC 0080/2010-R de 3 de mayo, refiere
que los derechos no son absolutos, el ejercicio de los mecanismos de defensa tampoco son
ilimitados; en ese marco, al ser Bolivia un Estado de Derecho Unitario con características
propias como establece el art. 1 de la CPE, se guía por los valores de respeto,
complementariedad, transparencia y equilibrio; en consecuencia, todo acto de las entidades que
administren justicia, debe sujetarse a los principios y valores constitucionales a los que también
está obligado el Tribunal Constitucional, de tal manera, se debe evitar cualquier intromisión,
conflicto o tensión con otras jurisdicciones como es la ordinaria; y, 4) El Juez de instrucción,
como contralor de los derechos y garantías fundamentales, es la autoridad que deberá resolver la
situación jurídica de los imputados y no así el Tribunal de alzada.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Dentro el proceso penal por la presunta comisión de los delitos de incumplimiento de
deberes, de contrato, conducta antieconómica y falsedad ideológica, seguido por el Ministerio
Publico contra el ahora accionante y otros, ante el Juzgado de Instrucción Mixto, Liquidador y
Cautelar de Arque, se evidencia que mediante Auto de 21 de diciembre de 2011, en aplicación
del art. 54 inc. 2) del CPP, el Juez a cargo del proceso, dispuso la detención preventiva, entre
otros, de Iver Waldo Quilo Lozada, por concurrir los supuestos establecidos en los arts. 233.1,
234.1, 2 y 6; y, 235.2 de la Ley 007, a cumplirse en el recinto penitenciario de San Antonio,
ordenando se expidan los correspondientes mandamientos de detención preventiva (fs. 4 a 11).

II.2. Contra el Auto de 21 de diciembre de 2011, Iver Waldo Quilo Lozada y Omar Gonzalo
Flores Fulguera, mediante memorial presentado el 23 de diciembre de 2012, interpusieron
recurso de apelación incidental, considerando que el Juez Instructor Mixto, Liquidador y
Cautelar de Arque, determinó su detención preventiva sin realizar una valoración de la
documentación presentada y al margen de una interpretación sistemática y armónica, tanto de la
Constitución Política del Estado como de las normas del Código de Procedimiento Penal y la
Ley 007 de Modificaciones al Sistema Normativo Penal (fs. 13 a 14 vta.).

II.3. Mediante Auto de Vista de 25 de enero 2012, las autoridades ahora demandadas,
determinaron la nulidad de la Resolución de 21 de diciembre de 2011, disponiendo que el Juez a

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 251


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

quo, de inmediato, programe nuevo día y hora de audiencia a objeto de considerar y resolver la
situación jurídica de los imputados, por haber evidenciado que la referida autoridad incurrió en
la causal de nulidad prevista por el art. 169.3 del CPP con relación al art 124 del mismo cuerpo
legal, al no observar el “debido proceso, en su elemento de la debida fundamentación” (sic) (fs.
20 a 21).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que las autoridades demandadas lesionaron sus derechos a la libertad física y
libertad de locomoción, así como la garantía del debido proceso, habida cuenta que dentro del
proceso penal tramitado en su contra por la presunta comisión de los delitos de incumplimiento
de deberes, de contratos, conducta antieconómica y falsedad ideológica, emitieron en apelación,
el Auto de Vista de 25 de enero de 2012, mediante el cual, no obstante haber anulado la
Resolución del a quo por falta de fundamentación, en lugar de ordenar su inmediata libertad, a
su criterio de manera incongruente, lo pusieron a disposición del Juez cautelar, para que sea este
último quien resuelva sobre su situación jurídica. En consecuencia, en revisión de la Resolución
dictada por el Juez de garantías, corresponde dilucidar si tales extremos son evidentes y si
constituyen persecución, aprehensión, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales, a fin
de otorgar o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad y presupuestos de activación

Previo a ingresar al análisis del caso concreto, es necesario introducir el tema referido a la
naturaleza jurídica de la acción de libertad, puesto que de dicha esencia se podrá determinar la
viabilidad o no de la presente demanda, labor que será cumplida a continuación.

La acción de libertad conocida en el derecho comparado y en nuestra legislación abrogada como


“recurso de habeas corpus”, encuentra fundamento en innumerables instrumentos normativos de
orden internacional como en la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre,
Declaración Universal de Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, disposiciones normativas que forman parte del bloque de constitucionalidad, de
conformidad a lo dispuesto por el art. 410 de la CPE. Se trata de un mecanismo de defensa
constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la
protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la libertad física como de
locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o
indebidos por parte de servidores públicos o de personas particulares; así como a la vida, cuando
esté en peligro.

Esta garantía de carácter procesal constitucional se encuentra consagrada en el art. 125 de la


CPE, donde dispone que: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y, solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”. Norma constitucional
concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), la cual
establece que su objeto es la garantía, protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad
física y a la libertad de locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de esos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 252


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En tal sentido, debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está diseñada
sobre la base de dos pilares esenciales, el primero referente a su naturaleza procesal y el
segundo, compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que
configura el contenido esencial de esta garantía, es decir, su naturaleza procesal, se establece que
se encuentra revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada por
sus características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e inmediación;
procede contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no reconoce fueros ni
privilegios. Postulados que pueden ser inferidos de la norma constitucional antes referida.

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se encuentra
configurado por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE, se
resumen en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la
libertad física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya
procesamiento indebido; y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida.

Teniendo presente que los supuestos fácticos descritos planteados en la presente acción tutelar,
se refieren a un posible procesamiento indebido, corresponde a continuación abordar ese tema
en particular.

III.2. La acción de libertad y el debido proceso

De la delimitación de la naturaleza jurídica de la acción de libertad, se desprenden los siguientes


presupuestos de activación de este mecanismo de defensa: 1) Cuando considere que su vida está
en peligro; 2) Que es ilegalmente perseguida; 3) Que es indebidamente procesada; y, 4) O
privada de libertad personal o de locomoción.

Respecto a las denuncias referidas a procesamiento indebido, la jurisprudencia constitucional ha


sido uniforme al señalar que la vía idónea para su impugnación es el amparo constitucional; sin
embargo, cuando se demuestre que esas vulneraciones afectaron directamente al derecho a la
libertad física o libertad de locomoción del accionante, dicha protección se verá materializada a
través de la acción de libertad, en aquellos casos en los cuales, el procesamiento indebido
constituya la causa directa que originó la restricción o supresión de los antes citados derechos
previo cumplimiento de la subsidiariedad excepcional que rige a este tipo de acciones.

Con relación a este tema, la doctrina desarrollada por este Tribunal Constitucional, estableció que la
protección otorgada por la acción de libertad cuando se refiere al debido proceso, no abarca a todas
las formas que puede ser vulnerado, sino, queda reservada para aquellos entornos que conciernen
directamente al derecho a la libertad física y de locomoción; caso contrario, deberá ser tutelado
mediante la acción de amparo constitucional, dado que mediante ésta no es posible analizar actos o
decisiones demandados como ilegales que no guarden vinculación con los derechos citados. Además
de este requisito, debe tenerse presente que opera igualmente el principio de subsidiariedad, de modo
que previo a su interposición, deberán agotarse los medios idóneos dentro de la jurisdicción ordinaria
donde se tramita la causa, y no pretender su tutela en el ámbito constitucional, cuando los reclamos no
fueron activados oportunamente, habida cuenta que no puede utilizarse para salvar la negligencia de
la parte demandante. En similar sentido se pronunció este Tribunal en las SSCC 0200/2002-R,
0414/2002-R, 1865/2004-R, 0619/2005-R y 0057/2010-R, entre otras.

En esa línea, la SC 0619/2005-R de 7 de junio, asumiendo los entendimientos contenidos en la


SC 1865/2004-R de 1 de diciembre, precisó lo siguiente: “…en los procesos instaurados de
acuerdo al ordenamiento jurídico boliviano, en el sentido del orden constitucional, las lesiones
al debido proceso están llamadas a ser reparadas por los mismos órganos jurisdiccionales que

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 253


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conocen la causa, lo que implica que quien ha sido objeto de esa lesión, debe pedir la
reparación a los jueces y tribunales ordinarios, asumiendo activamente su rol dentro del
proceso, a través de los medios y recursos que prevé la ley, y sólo agotados éstos, se podrá
acudir ante la jurisdicción constitucional a través del recurso de amparo constitucional, que,
como se ha señalado, es el recurso idóneo para precautelar las lesiones a la garantía del
debido proceso; a no ser que se constate que a consecuencia de las violaciones al debido
proceso invocadas, se colocó al recurrente en absoluto estado de indefensión, lo que no le
permitió impugnar los supuestos actos ilegales y que recién tuvo conocimiento del proceso al
momento de la persecución o la privación de la libertad.

Un entendimiento contrario, determinaría que los jueces y tribunales de hábeas corpus, y el


propio Tribunal Constitucional, asuman una atribución que el orden constitucional no les
otorga, posibilitando que toda reclamación por supuestas lesiones al debido proceso por quien
se encuentre privado de libertad, prospere a través del recurso de hábeas corpus,
desnaturalizando la actuación de los jueces y tribunales ordinarios, que son los que tienen
competencia, primariamente, para ejercer el control del proceso, y sólo si la infracción no es
reparada se abre la tutela constitucional (…) para que la garantía de la libertad personal o de
locomoción pueda ejercerse mediante el recurso de hábeas corpus cuando se denuncia
procesamiento ilegal o indebido deben presentarse, en forma concurrente, los siguientes
presupuestos: a) el acto lesivo, entendido como los actos ilegales, las omisiones indebidas o las
amenazas de la autoridad pública, denunciados, deben estar vinculados con la libertad por
operar como causa directa para su restricción o supresión; b) debe existir absoluto estado de
indefensión, es decir, que el recurrente no tuvo la oportunidad de impugnar los supuestos actos
lesivos dentro del proceso y que recién tuvo conocimiento del mismo al momento de la
persecución o la privación de la libertad…”.

En consecuencia, la acción de libertad, tratándose de medidas cautelares de carácter personal,


sólo puede activarse ante un procesamiento indebido, cuando se encuentra relacionado
directamente con la amenaza, restricción o supresión de la libertad física o de locomoción y se
hubieren agotado todos los mecanismos intraprocesales de impugnación, salvo que al actor se le
hubiere colocado en un absoluto estado de indefensión, caso en el que no resulta razonable la
exigencia de la observancia del principio de subsidiariedad excepcional que rige a la acción de
libertad, precisamente por su imposibilidad de activar los medios de reclamación; de tal manera
que otras formas de procesamiento indebido, no pueden ser compulsadas mediante la presente
acción de defensa, debiendo hacérselas en su caso en el ámbito de la otra acción tutelar como el
amparo constitucional.

III.3. El debido proceso en medidas cautelares y su protección a través de la acción de


libertad

En aquellos casos referidos específicamente a medidas cautelares, modulando los


entendimientos asumidos en la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, la SC 0008/2010-R de 6 de
abril, recalcó lo siguiente:

“I. El recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz para
conocer y restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a la
vida, la libertad o constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o ponga en
peligro el derecho a la libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar de
existir mecanismos de protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos
resulten ser evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de
defensa, por la urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 254


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

los derechos afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de


defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la
persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los afectados;
en estos casos por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse
restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas.
II. Asimismo, cuando exista privación efectiva de libertad, por ser esta una causal grave, se
entenderá que la vía procesal existente no es idónea, cuando se pruebe que una vez activados
estos mecanismos procesales, su resolución y efectiva protección serán dilatadas, por ejemplo,
por ser irrazonables los plazos de resolución; por existir excesiva carga procesal para una
rápida decisión o ejecución de la decisión o por no cumplirse con los plazos para emisión de
resoluciones establecidos por la ley.

III. En el caso de vulneración al derecho a la vida, protegido por la acción de libertad,


procederá esta acción de forma directa y sin necesidad de agotar otra vía”.

Siguiendo la misma línea, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, se refirió a las situaciones


excepcionales en las que a través de la acción de libertad, no es posible ingresar al análisis de
fondo de la problemática denunciada, estableciendo tres supuestos de improcedencia:
“Primer supuesto:

Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía cometieron


arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía no existe
aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el juez cautelar de turno.
En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el aviso del
inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella donde se
debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De no ser así, se estaría
desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a través del legislador le
ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en el control de la
investigación.

Segundo Supuesto:

Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una resolución judicial de
medida cautelar que; por ende, afecta al derecho a la libertad física o de locomoción, con
carácter previo a interponer la acción de libertad, se debe apelar la misma, para que el
superior en grado tenga la posibilidad de corregir la arbitrariedad denunciada. Puesto que el
orden legal penal ha previsto ese medio impugnativo, precisamente para que a través de un
recurso rápido, idóneo, efectivo y con la mayor celeridad se repare en el mismo órgano judicial,
las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen cometido en dicha fase o etapa procesal. Lo
propio si está referido a cuestiones lesivas a derechos fundamentales relacionados a actividad
procesal defectuosa, o relacionado al debido proceso, casos en los cuales se debe acudir ante la
autoridad judicial que conoce la causa en ese momento procesal, puesto que el debido proceso
es impugnable a través de la acción de libertad, sólo en los casos de indefensión absoluta y
manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o restricción a la libertad
física.

Tercer supuesto:

Si impugnada la resolución la misma es confirmada en apelación; empero, en lugar de activar


inmediatamente la acción libertad, decide voluntariamente, realizar una nueva petición ante la
autoridad ordinaria, tendiente a un nuevo análisis y reconsideración de su situación jurídica,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 255


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

sea mediante una solicitud de modificación, sustitución, cesación de detención preventiva, etc.,
y la misma está en trámite, en esos casos, ya no es posible acudir a la jurisdicción
constitucional impugnando la primera o anterior resolución judicial, donde se emitió el auto de
vista, inclusive; por cuanto las partes de un proceso están impelidas de actuar con lealtad
procesal, de no ser así, se provocaría una duplicidad de resoluciones en ambas jurisdicciones, e
incidiría negativamente en el proceso penal de donde emerge la acción tutelar”.

De lo establecido en el primer apartado de la SC 0008/2010-R y en la primera parte del segundo


supuesto de la SC 0080/2010-R, se desprende que cuando se impugna una resolución judicial de
medida cautelar, previo a acudir a la jurisdicción constitucional mediante la presente acción de
tutela, el accionante deberá activar los mecanismos idóneos de impugnación intraprocesal ante la
jurisdicción ordinaria.

En ese orden, y a efectos de dejar claramente establecido cual es la mecánica que el actor debe
activar y agotar, previo a acudir a esta jurisdicción en busca de tutela, es preciso revisar el
sistema recursivo de impugnación comprendido en la normativa procesal penal de nuestro país,
en cuanto a la aplicación del régimen de medidas cautelares, ante su aplicación, modificación o
rechazo, el cual prevé el recurso de apelación incidental. En ese marco, el art. 251 del CPP,
modificado por el art. 15 de la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana (LSNSC),
dispone que: “La resolución que disponga, modifique o rechace las medidas cautelares, será
apelable, en el efecto no suspensivo, en el término de setenta y dos horas. En ese mismo sentido
se desarrolló en las SSCC 0160/2005-R y 0181/2005-R.

Interpuesto el recurso, las actuaciones pertinentes serán remitidas ante la Corte Superior de
Justicia, en el término de veinticuatro horas.

El Tribunal de apelación resolverá, sin más trámite y en audiencia, dentro de los tres días
siguientes de recibidas las actuaciones, sin recurso ulterior”.

Procedimiento en el que se destaca el carácter especial y sumario, precisamente por la necesidad


de que la situación jurídica del imputado sea definida lo antes posible, dado que, se encuentra de
por medio su derecho a la libertad o de locomoción, y por lo tanto, se debe garantizar la
celeridad, especialmente en aquellos casos en los que se estableció la aplicación de una medida
cautelar de carácter personal, o se rechazó la modificación de la misma.

Conforme a la normativa y jurisprudencia revisadas, podemos concluir que previo a la


interposición de la presente acción, a efectos de exigir el restablecimiento del derecho a la
libertad, así como a la persecución o procesamiento indebido, es necesario agotar todos los
mecanismos idóneos, eficientes y oportunos de impugnación intraprocesal; de lo contrario, esta
vía constitucional no abre su ámbito de protección, lo que equivale, en la problemática
planteada, a que el afectado, si no se encuentra de acuerdo con la decisión asumida por el
juzgador, está obligado a plantear recurso de apelación incidental contra la resolución que
dispone, modifica o rechaza la aplicación de una medida cautelar dispuesta en su contra, porque
dicho recurso reúne las características de idoneidad, inmediatez y eficacia para el
restablecimiento del derecho a la libertad, y si en la jurisdicción ordinaria, no se atiende su
petitorio y, éste considera que la vulneración a su derecho aún persiste, entonces, recién quedará
expedita la acción de libertad.

No obstante lo señalado, el entendimiento asumido en la última parte del segundo supuesto


contenido en el Fundamento Jurídico III.4 de la SC 0080/2010-R, además de los requisitos
exigidos por la propia jurisprudencia para aquellos casos en los que denuncien lesiones al debido

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 256


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

proceso, como son su vinculación directa con el derecho a la libertad o derecho de locomoción y
el agotamiento de los medios de impugnación intraprocesal, incluye la “indefensión absoluta y
manifiesta”, sosteniendo, de manera expresa, lo siguiente:

“…puesto que el debido proceso es impugnable a través de la acción de libertad, sólo en los
casos de indefensión absoluta y manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la
privación, o restricción a la libertad física”.

Al respecto y en coherencia con lo manifestado precedentemente, tratándose de medidas


cautelares de carácter personal, no es posible exigir la concurrencia del absoluto estado de
indefensión como requisito para activar la acción de libertad, habida cuenta que, conforme lo
establecieron las propias Sentencias Constitucionales citadas, el actor debe agotar los
mecanismos de impugnación intraprocesales previo a la activación de la acción de libertad. Un
razonamiento contrario implicaría exigirle al accionante una situación jurídica materialmente
imposible, porque desde ya, el agotamiento de los medios de reclamación idóneos, obliga a su
participación activa en el proceso. Situación diferente es aquella en la que, al imputado se lo
colocó en un estado absoluto de indefensión, lo que le impidió activar los mecanismos
intraprocesales referidos, circunstancia última en la que la acción de libertad se activará de
manera directa.

Razonamiento que aclara la línea jurisprudencial, únicamente con relación a la última parte del
segundo supuesto, extractada y analizada de la SC 0080/2010-R, por los motivos antes
señalados; teniendo en cuenta además, que de manera implícita, el Tribunal Constitucional, en
los casos referidos a medidas cautelares de carácter personal que fueron sometidos a su
conocimiento, aplicó el razonamiento que expresamente se desarrolló en la presente Sentencia.

III.4. Congruencia como elemento del debido proceso

Establecida la línea jurisprudencial y teniendo en cuenta que el accionante agotó los medios
idóneos de impugnación referidos líneas arriba, a efectos de analizar el fondo de la causa,
corresponde referirse al principio de congruencia, bajo los siguientes aspectos.

La congruencia como elemento del debido proceso, debe ser comprendida desde dos ámbitos de
acción, de un lado, dentro de cualquier proceso como unidad, delimitando las actuaciones de las
partes procesales como del órgano jurisdiccional o administrativo; y de otro, en cuanto a la
estructura misma de las resoluciones, situación esta última que involucra la exigencia de que, en
dicho fallo, se absuelvan todos los aspectos puestos a consideración del juzgador de manera
coherente y que además de ello, se establezca una relación entre los argumentos expuestos por
las partes, los fundamentos argüidos por el juzgador donde se incluirá la base normativa, y la
parte resolutiva que deberá responder o ser el resultado del problema jurídico, analizado y
considerado por dicha autoridad.

En cuanto a los alcances del principio de congruencia, en materia penal, la SC 1312/2003-R de 9


de septiembre, señaló: “...a fin de resolver la problemática planteada, resulta menester
referirnos a los alcances del principio de congruencia, que cobra relevancia en cualquier
naturaleza de proceso, en especial en materia penal, pues este marca el ámbito en el que la
parte querellante va a aportar sus pruebas tomando como base los delitos que denuncia, como
también delimitaba el campo de acción en el que el juzgador va a dirigir el proceso y finalmente
señala también de la misma forma que en ese marco ha de asumir defensa el imputado o
procesado, siendo por tanto -como se dijo- de mucha importancia en especial para este último
sujeto procesal, que a tiempo de asumir defensa se le haga conocer por qué delito se le está

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 257


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

juzgando, de manera que sobre esa acusación él pueda desvirtuar la misma, alegando,
proponiendo pruebas y participando en la práctica probatoria y en los debates, para lo que
resulta obvio, que necesariamente debía conocer con antelación suficiente los delitos que se le
acusaban, sin que la sentencia posteriormente pueda condenarle por algo de lo que antes no se
acusó y respecto de lo cual consiguientemente no pudo articular su estrategia exigida, como le
garantizaba la ley” .

En relación al segundo ámbito de los señalados, referido a la estructura de la resolución, a través


de la SC 1009/2003-R de 18 de julio, el Tribunal refirió que: “…el juzgador también deberá
observar estrictamente el principio de congruencia, el mismo que no sólo requiere ser respetado
en el transcurso del proceso entre una y otra resolución, sino que también es de observancia en
el texto de una sola resolución, pues como establece el ordenamiento jurídico, toda resolución
tiene una estructura básica que marca la estructura formal que tiene que respetarse. Así, en
toda resolución, deben en principio identificarse las partes, una suma de las pretensiones así
como también el objeto de la resolución, posterior a ello, tendrá que exponerse una parte
relativa de lo demandado, otra relativa a los hechos comprobados por el juzgador, otra que
exponga el razonamiento del juzgador más las normas legales que sustenten dicho
razonamiento y finalmente la parte resolutiva que deberá -resulta por demás obvio- responder a
las partes precedentes, lo que significa, que la decisión debe guardar completa correspondencia
con todo lo expuesto a lo largo del texto de la resolución; si no se estructura de tal forma una
resolución, ésta carecerá de consecuencia, puesto que luego de analizar, relatar y analizar
determinados hechos se llegaría a resultados distintos…”.

“Tal razonamiento es perfectamente aplicable a todo órgano, sea público o privado, que tenga
a su cargo el decidir sobre procesos en el que las determinaciones que emanen de sus
resoluciones, sean lo suficientemente motivadas, y sobre todo congruentes, para evitar
confusiones a aquellos que se someten a tales procesos, dentro de instituciones tanto públicas
como privadas, dentro de procesos administrativos como judiciales, por lo que en mérito al
principio de favorabilidad establecido por la Constitución Política del Estado vigente en su art.
256, el derecho a la motivación y congruencia de las resoluciones, como un elemento del debido
proceso, debe tener una amplia aplicación en todo tipo de procesos, en los que los derechos
fundamentales de las personas estén controvertidos” (SC 1145/2010-R de 27 de agosto).

III.5. Análisis del caso concreto

Efectuadas las precisiones doctrinales y jurisprudenciales, corresponde analizar y resolver el


fondo de la causa, en atención a los presupuestos de activación de la presente acción, dado que
la problemática emerge de la apelación incidental de una medida cautelar.

En ese orden, se evidencia que el accionante impugna de incongruente el Auto de Vista de 25 de


enero de 2012, mediante el cual los Vocales codemandados, determinaron anular la Resolución
de 21 de diciembre de 2011 emitida por el Juez Mixto y Liquidador de la localidad de Arque,
por la que se ordenó la detención preventiva del accionante y otros, ante la falta de
fundamentación y motivación, disponiendo que dicha autoridad señale nueva audiencia de
“inmediato” para considerar la situación jurídica de los imputados, entre ellos, Iver Waldo Quilo
Lozada, lo que implica que el imputado continúa en su condición de privado de libertad.
Decisión esta última que a decir del accionante, carece de congruencia, porque a su criterio, una
resolución nula sería inexistente, y por lo tanto, las actuaciones jurisdiccionales deben
retrotraerse hasta antes de la Resolución anulada, por ende, debe recuperar su libertad, o bien,
como señala, aplicársele una medida sustitutiva.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 258


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

A mayor argumentación, se tiene que la vulneración a la libertad y a la congruencia como


elemento del debido proceso, versa en el hecho que a tiempo de conocer su apelación contra la
resolución del Juez cautelar que dispuso su detención preventiva, el Tribunal de alzada, pese a
anular la misma, no ordenó la inmediata libertad, decisión que no puede ser considerada como
lesiva de los derechos fundamentales del imputado, dado que cuando los Vocales demandados
verificaron la falta de fundamentación en el fallo apelado, dispusieron su nulidad; empero, ello
no implica una resolución en el fondo de la causa, y menos que dicha instancia fuere competente
para resolver sobre la situación jurídica del mismo, ni disponer su libertad o la aplicación de una
medida sustitutiva, dado que dicha decisión dependerá de la valoración de los elementos de
convicción aportados en el proceso y por tanto las consecuencias jurídicas dependerán
expresamente de esa valoración.

Supuesto distinto al caso en el que el Tribunal de alzada resuelve el recurso planteado en el


fondo y determina la revocatoria de la medida restrictiva de libertad impuesta por el juez
cautelar y dispone en consecuencia la libertad irrestricta o bien, la aplicación de una medida
sustitutiva, lo que en definitiva no ocurrió en el problema planteado, porque como se dijo, ello
se determinará una vez repuesta la resolución anulada con la debida fundamentación, dado que
la nulidad de un actuado procesal, no conlleva de manera automática la concesión de libertad a
los procesados.

Consiguientemente, por los argumentos expuestos, no se evidencia vulneración al derecho a la


libertad del accionante como tampoco al procesamiento indebido.

Por los fundamentos expuestos, se concluye que el Juez de garantías al haber denegado la
acción de libertad, evaluó correctamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia; y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución
004/2012 de 3 de febrero; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 259


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0038/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00013-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 01/12 de 6 de enero de 2012 pronunciada dentro de la acción de


libertad, interpuesta por Luis Andrés Ritter Zamora en representación sin mandato de
Eduardo Tussel Vega contra William Tórrez Tordoya y Edgar Carrasco Sequeiros, Vocales
de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Mediante memorial de 3 de enero de 2012, cursante de fs. 22 a 26, el accionante expresa los
siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

El accionante refiere, que su representado fue detenido ilegalmente e imputado de manera injusta por
la presunta comisión del delito de tráfico de sustancias controladas, imponiéndosele medidas
sustitutivas a su detención preventiva, en virtud a la duda razonable y el principio de ubicuidad, dado
que no era posible que hubiere podido cometer el precitado delito, porque en ese entonces se
encontraba detenido.

Decisión contra la cual, en la misma audiencia, el Ministerio Público presentó recurso de


apelación, remitiéndose actuados ante la Sala Penal Primera a efectos de su resolución, instancia
en la que, sin notificarle previamente se llevó a cabo la audiencia donde se le revocaron las
medidas sustitutivas en aplicación del art. 234.6 del Código de Procedimiento Penal (CPP);
impidiéndole defenderse.

Como consecuencia de lo indicado, la citada Sala, advertida de su error, anuló la audiencia


celebrada y señaló un nuevo verificativo a una “velocidad impresionante” (sic), lo que motivó
que de su parte, planteara recusación contra los miembros del Tribunal de alzada, habida cuenta
que éstos ya habían emitido criterio respecto a su situación procesal en la primera audiencia, y
no obstante ello, se le rechazó el recurso interpuesto, volviendo a revocarle su libertad, esta vez,
en aplicación de los arts. 234.6 y 235.1 y 2 del CPP, pese a que conforme a la jurisprudencia
constitucional, existe impedimento inmediato de realizar actos procesales en casos de
recusación.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 260


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Señala como lesionados los derechos de su representado a la libertad, al debido proceso, a la


“seguridad jurídica” y a la defensa, citando al efecto los arts. 9, 13, 22, 23, 115, 116, 117, 119,
120 y 410.II de la Constitución Política del Estado (CPE); 8 y 9 de la Declaración Universal de
los Derechos Humanos; y 7.6 de la Convención Americana Sobre Derechos Humanos.

I.1.3. Petitorio

Solicita que se conceda la tutela, pidiendo taxativamente lo siguiente: “se anule el auto de vista
donde se me revocan mis medidas sustitutivas y sea juzgado por autoridad imparcial” (sic).

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

En audiencia pública celebrada el 6 de enero de 2012, conforme consta en el acta cursante de fs.
94 a 95, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado representante del accionante ratificó los términos de su demanda, y los amplió
señalando lo siguiente: i) El Tribunal de apelación anuló la primera audiencia así como la
revocatoria de las medidas sustitutivas impuestas al representado del accionante, en cumplimiento
a un fallo emitido dentro de una acción de libertad, por falta de notificación al afectado; ii) El fallo
del Tribunal de alzada debió circunscribirse a lo preceptuado por el art. 398 del CPP; limitándose a
resolver únicamente los aspectos cuestionados en la apelación; iii) Los codemandados actuaron
ultra petita; es decir, más allá de lo pedido, porque revocaron la libertad del coimputado Eduardo
Tussel Vega, aplicando los arts. 234.6 y 235.1 y 2, todos del CPP, cuando el único aspecto apelado
por el Ministerio Público fue el primero de los citados; y, iv) Instalaron la audiencia y revocaron
las medidas sustitutivas impuestas, estableciendo detención preventiva al apelante, pese a estar
recusados.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los demandados William Tórrez Tordoya y Edgar Carrasco Sequeiros, Vocales de la Sala Penal
Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz no presentaron informe escrito y
tampoco asistieron a la audiencia señalada.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez Quinto de Sentencia constituido en Juez de garantías, pronunció


la Resolución 01/12 de 6 de enero de 2012, cursante de fs. 95 vta. a 97, por la que denegó la
tutela reclamada, bajo el argumento que el representado del accionante presentó dos acciones de
libertad contra las mismas autoridades, reclamando las mismas pretensiones y utilizando los
similares supuestos fácticos, por lo que concurre identidad de sujeto, objeto y causa.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por Ministerio Público contra el representado del
accionante y otros, por la presunta comisión de los delitos de tráfico de sustancias controladas,
asociación delictuosa y confabulación, en atención a las apelaciones incidentales planteadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 261


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tanto por la parte acusadora como por los imputados, mediante decreto de 12 de diciembre de
2011, la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, señaló
audiencia a efectos de la consideración del recurso de alzada para el 14 del indicado mes y año a
horas 15:30 (fs. 2).

II.2. El día y hora señalados se celebró la audiencia fijada, actuado en el cual, el Tribunal de
apelación, entre otras cosas, resolvió revocar la Resolución del Juez inferior, disponiendo la
aplicación de la detención preventiva para el representado del accionante, a ser cumplida en el
penal de Palmasola (fs. 4 a 10); emitiéndose el correspondiente mandamiento de detención en la
misma fecha (fs. 11).

II.3. Del informe de 16 de ese mismo mes y año emitido por el Secretario de Cámara de la Sala
Penal Primera, se evidencia que Eduardo Tussel Vega no fue notificado con el decreto de 12 de
diciembre de 2011 de señalamiento de audiencia (fs. 12). En virtud a lo cual, el Tribunal de
apelación, por Auto de 17 del mencionado mes y año, anuló las diligencias de notificación, así
como el acta de audiencia de apelación de medidas cautelares y el mandamiento de detención
preventiva, señalando nueva audiencia para el 19 de diciembre a horas 16:00 (fs. 12 a 13).

II.4. Mediante memorial presentado el mismo 16 de diciembre de 2011 a horas 17:31, se


constata que Eduardo Tussel Vega interpuso una primera acción de libertad contra los ahora
demandados, por la falta de notificación detallada en la Conclusión anterior (fs. 15 a 18 vta.).

II.5. A horas 10:53 del 19 de diciembre de 2011, Eduardo Tussel Vega planteó recusación
contra el Tribunal de alzada, por “…interés manifiesto…” (sic), al haber expresado su opinión
sobre el proceso en la primera audiencia celebrada (fs. 20 a 21).

II.6. La Sala Penal Primera, constituida en Tribunal de apelación, en audiencia pública celebrada
el 19 de diciembre de 2011, rechazó in límine la recusación interpuesta en su contra en
aplicación del art. 321.2 del CPP, y a continuación, previo a escuchar a las partes procesales,
dispusieron la detención preventiva de Eduardo Tussel Vega por concurrir requisitos
establecidos en el art. 233.1 y 2 del CPP con relación a los arts. 235.1 y 2 y 234.6 del mismo
cuerpo legal (fs. 38 a 51).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

En la presente petición de tutela, con carácter previo, es imperante establecer el objeto y la causa
de la presente acción de libertad, en ese orden, se tiene que el objeto de la petición es el
resguardo a los derechos a la libertad, seguridad jurídica, al debido proceso y a la defensa;
asimismo, la causa de la petición, versa sobre dos actos concretos denunciados como lesivos a
los derechos antes citados: a) La celebración de la audiencia de consideración de los recursos de
alzada interpuestos tanto por el Ministerio Público como por los imputados y la revocación de
medidas sustitutivas impuestas, sin previa notificación al ahora accionante; y b) La realización
de una segunda audiencia y la revocación de su libertad, a pesar de estar sancionada con nulidad
todos los actos efectuados después de la presentación de una recusación.

En mérito al objeto y causa de la presente acción de tutela, la argumentación jurídica a ser


desarrollada, abordará los siguientes tópicos específicos: i) La activación paralela de acciones de
libertad con identidad de objeto, sujeto y causa; y ii) El rechazo in límine de recusaciones en
materia penal a la luz del debido proceso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 262


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En consecuencia, en revisión de la Resolución dictada por el Juez de garantías y en mérito a los


tópicos antes descritos, corresponde analizar las denuncias realizadas mediante la presente
acción de libertad, tarea que será desarrollada infra.

III.1. La prohibición de activación ulterior de acciones de libertad con identidad de objeto,


sujetos y causa

Prima facie, a la luz de la presente problemática, debe señalarse que el Estado Plurinacional de
Bolivia, a través de la Constitución Política del Estado aprobada por Referendo Constitucional el año
2009, adoptó un sistema plural de control de constitucionalidad, reconociendo un ámbito específico
de control tutelar destinado a la defensa pronta y oportuna de derechos fundamentales, en ese
contexto, la acción de libertad disciplinada en el artículo 125 de la CPE, es un mecanismo de defensa
eficaz e idóneo para la tutela de los derechos a la vida, a la libertad física o de locomoción; asimismo,
constituye un mecanismo de defensa frente a procesamientos indebidos y persecuciones ilegales
vinculados con el derecho a la libertad.

En el orden de ideas desarrollado, es menester señalar que las decisiones resueltas en revisión en
ejercicio del control tutelar de constitucionalidad, adquieren la calidad de cosa juzgada material.

La cosa juzgada en materia constitucional asegura que merced a la identidad de objeto, sujetos y
causa, la decisión no pueda ser modificada ni alterada de manera ulterior; en ese contexto, para
evitar duplicidad de fallos y por ende para prevenir el peligro de alteración de fallos con calidad
de cosa juzgada, en resguardo de una eficaz seguridad y certeza jurídica, existe una prohibición
de activación ulterior de mecanismos de tutela con identidad de objeto, sujeto y causa.

En el marco de lo expuesto, por la naturaleza jurídica y derechos tutelados a través de la acción


de libertad, en mérito a su característica de eficaz y oportuno mecanismo de defensa de
derechos, y a través de la SC 1347/2003-R de 16 de septiembre, reiterada en la SC 0101/2010-R
de 10 de mayo, entre otras, se estableció la prohibición de activar mecanismos ulteriores de
defensa cuando concurra una identidad de objeto, sujetos y causa; asimismo, a partir de este
entendimiento jurisprudencial aplicado de manera uniforme, se señaló también, la posibilidad de
activar un ulterior mecanismo de defensa, solamente cuando en una petición de tutela anterior, el
juez o tribunal de garantías por un presupuesto formal, no hubiere ingresado al análisis de fondo
de la problemática, en este caso, la nueva acción estará destinada a lograr el análisis de fondo de
la problemática, siempre y cuando el peticionante de tutela, subsane los aspectos formales que
evitaron que el mecanismo de defensa anteriormente planteado hubiere ingresado al análisis de
fondo de la causa.

Ahora bien, en el marco del nuevo diseño constitucional y de acuerdo a la ingeniería propia de la
acción de libertad y a la naturaleza del control tutelar plural de constitucionalidad, debe
establecerse que el contenido de la línea jurisprudencial precedentemente citada es razonable y
compatible con el nuevo modelo constitucional por lo que debe ser asumida por este nuevo
Tribunal Constitucional Plurinacional.

En esta perspectiva, es necesario señalar que al ser la acción de libertad un mecanismo de


defensa constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido
para la protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la vida, libertad física o
de locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales
o indebidos por parte de servidores públicos o de personas particulares y considerando que esta
garantía jurisdiccional es de tramitación especial y sumarísima, reforzada por sus características
de inmediatez en la protección, sumariedad, informalismo, generalidad e inmediación;

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 263


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

inequívocamente debe establecerse que una vez interpuesta la acción de libertad, no puede
activarse ulteriormente este mismo mecanismo, porque de lo contrario se generaría una
disfunción procesal contraria a la seguridad y certeza jurídica.

III.1.1. Análisis del primer acto denunciado como lesivo a los derechos del accionante

Del contenido del memorial de acción de libertad, se establece que el primer acto
denunciado como lesivo a los derechos a la libertad, seguridad jurídica, al debido proceso y
a la defensa, versa sobre la celebración de la audiencia de consideración de los recursos de
alzada interpuestos tanto por el Ministerio Público como por los imputados y la revocación
de medidas sustitutivas impuestas, sin previa notificación al ahora accionante. En ese
contexto, de la compulsa de antecedentes, se establece que mediante memorial presentado
el mismo 16 de diciembre de 2011 a horas 17:31, se constata que Eduardo Tussel Vega,
interpuso una primera acción de libertad a través de la cual, textualmente denunci a lo
siguiente: “El M.P en audiencia apela, se remiten actuados a la Corte Superior de Distrito,
en su Sala Penal Primera y los vocales recurridos sin notificarme llevan a cabo la audiencia
de apelación y me revocan mis medidas sustitutivas sin siquiera permitirme defender” (sic)
(fs. 15 a 18 vta.).

Del contenido de la primera acción de libertad interpuesta en fecha 16 de diciembre de


2011, se establece lo siguiente: a) El objeto de la petición fue la tutela al derecho a la
libertad, al debido proceso y a la defensa; b) La causa de la petición de tutela fue la
supuesta omisión de notificación al accionante con el señalamiento de día y hora para la
audiencia de medidas cautelares; c) Los sujetos procesales intervinientes en esta primera
acción son: i) como accionante: Eduardo Tussel Vega; y ii) como autoridades demandadas:
William Tórrez Tordoya y Edgar Carrasco Sequeiros, en calidad de Vocales de la Sala
Penal Primera. Asimismo, del contenido de la presente acción de libertad, se evidencia que
el objeto de petición de tutela, es el mismo que el de la primera acción interpuesta;
asimismo, se tiene que el primer acto denunciado como lesivo en esta acción de libertad, es
el mismo que el denunciado en una anterior acción de libertad. De la misma forma, se
evidencia que las autoridades demandadas son las mismas en ambas acciones tutelares.

Por lo expuesto y de acuerdo al Fundamento Jurídico III.1, en resguardo de la seguridad y


certeza jurídica, es evidente que no puede activarse de manera paralela mecanismos de control
tutelar, por tanto, al existir identidad de objeto, sujetos y causa entre la acción de libertad
presentada por el ahora accionante en fecha 16 de diciembre de 2011 y el primer acto
denunciado como lesivo a través de la presente acción de libertad, en cuanto a esta primera
denuncia, no puede ingresarse a un análisis de fondo de la problemática, por estar pendiente en
revisión la decisión referente a la primera acción tutelar activada.

III.2. Las reglas de la recusación en materia penal, a la luz del procesamiento indebido

Considerando que el segundo acto denunciado como lesivo se refiere a un supuesto vinculado
con las reglas de una recusación, en este estado de cosas, corresponde realizar el siguiente
análisis:

En primera instancia, no podría abordarse la presente problemática sin analizar con carácter
previo la naturaleza jurídica de la acción de libertad, en tal sentido, a la luz del sistema
interamericano de protección de derechos humanos, cuya normativa, decisiones, opiniones
consultivas u otros lineamientos son vinculantes para el Estado Plurinacional de Bolivia -tal
como lo entendió la SC 0110/2010-R de 10 de mayo-, debe establecerse que la piedra angular

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 264


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que estructura este sistema interamericano de protección de derechos humanos, está constituida
por la Convención Americana de Derechos Humanos, instrumento que por su naturaleza y en el
marco del mandato inserto en el art. 410 de la CPE, forma parte del bloque de constitucionalidad
del Estado Plurinacional de Bolivia; bajo esta perspectiva, el art. 25.1 de esta normativa, señala
que “Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso
efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus
derechos fundamentales reconocidos por la constitución, la ley o la presente Convención, aún
cuando tal violación sea cometida por personas que actúen en ejercicio de sus funciones
oficiales”, disposición que de acuerdo a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH),
constituye “…uno de los pilares básicos, no sólo de la Convención Americana, sino del propio
Estado de Derecho en una sociedad democrática en el sentido de la Convención”.

En ese contexto, el art. 125 de la CPE, disciplina la acción de libertad señalando lo siguiente:
“Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que
es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad
y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde
tutela a su vida, cesa la persecución indebida y se restablezcan las formalidades legales o se
restituya su derecho a la libertad”, diseño que es perfectamente compatible con la definición que
la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha desarrollado para este mecanismo, instancia
que ha catalogado a esta institución como una herramienta indispensable y de gran polivalencia
al ser “el medio idóneo tanto para garantizar la libertad, controlar el respeto a la vida e
integridad de la persona, e impedir su desaparición o la indeterminación de su lugar de
detención, así como para proteger al individuo contra la tortura u otros tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes”.

En el orden de ideas expuesto, corresponde desarrollar la primera nota fundamental que


configura el “contenido esencial” de esta garantía, es decir su naturaleza procesal, bajo esta
perspectiva, se establece que su esencia procesal, está estructurada al amparo de los principios
de sumariedad, celeridad, inmediación e informalismo y eficacia, postulados que pueden ser
inferidos del texto del art. 125 de la CPE y que garantizan una tutela judicial efectiva y un
acceso a la justicia constitucional, asegurando en definitiva el cumplimiento por parte del Estado
Plurinacional de Bolivia, del mandato inserto en el art. 25 de la Convención Americana de
Derechos Humanos (CADH).

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el “contenido esencial” de esta garantía, está
configurado por sus presupuestos de activación, que a la luz de la ingeniería del art. 125 de la
CPE, son cuatro: a) Los atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación del derecho a la
libertad; c) Cualquier acto u omisión que constituya procesamiento indebido; y, d)
Cualquier acto o omisión que implique persecución indebida. En mérito a lo expuesto,
ciñéndonos estrictamente al objeto y la causa de la presente problemática, es objetivo de la
presente sentencia, abordar con carácter previo, la temática del procesamiento indebido, tarea
que será desarrollada infra.

En efecto, para entender la dogmática del procesamiento indebido, es imperante determinar con
claridad la génesis constitucional del debido proceso como garantía constitucional, bajo este
aspecto, debe señalarse que la Convención Americana de Derechos Humanos, en su art. 8
disciplina las garantías judiciales propias de un procesamiento adjetivo enmarcado a derecho, en
ese contexto, los arts. 115, 116, 117, 119, 120 y 121 de la CPE, regula las reglas de un debido
proceso; bajo estos parámetros -en una interpretación acorde a la Constitución y los Tratados
internacionales referentes a Derechos Humanos-, debe señalarse que todo Estado Social y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 265


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Democrático de Derecho, como es el caso del Estado Plurinacional de Bolivia, a través del
órgano competente y como emergencia de la decisión fundada de un juez imparcial e
independiente, está facultado a establecer sanciones a toda persona previo cumplimiento de
presupuestos procesales o adjetivos establecidos por ley, en igualdad procesal, al amparo
de un amplio derecho a la defensa tanto técnica como material, en el marco de los
principios de contradicción y celeridad procesal; asimismo, en virtud a las reglas del debido
proceso, se debe garantizar el derecho a la impugnación, al desarrollo de todos los
presupuestos y las etapas procesales en estricta observancia de todas las garantías
reconocidas por la Ley Fundamental, Tratados Internacionales y leyes vigentes.

En este estado de cosas y una vez definido el debido proceso en materia penal, corresponde
ahora, establecer los mecanismos vigentes para su protección, conocidos en teoría de los
Derechos Humanos como garantías procesales eficaces para la tutela del debido proceso, en ese
contexto, cabe señalar que en la economía procesal-constitucional boliviana, se encuentra
reconocida expresamente disciplinada la acción de libertad como mecanismo idóneo para tutelar
el procesamiento indebido.

En efecto, siguiendo un diagnóstico jurisprudencial, se tiene que la jurisprudencia de este


Tribunal, en la SC 1865/2004-R de 1 de septiembre, la cual, como núcleo esencial de la
argumentación jurídica vinculante desarrollada, contempla tres aspectos esenciales a saber: a)
La protección a las reglas del debido proceso a través del entonces denominado recurso de
habeas corpus, cuando estas están directamente vinculadas a la libertad; b) El agotamiento
previo de mecanismos de defensa para la protección de las reglas del debido proceso; y, c) La
tutela de manera excepcional de las reglas del debido proceso directamente vinculadas a la
libertad, en caso de encontrarse el afectado en absoluto estado de indefensión, aspecto que
impida el agotamiento de las vías idóneas de impugnación. Así, este entendimiento señaló
“Conforme al orden constitucional y la jurisprudencia glosada, el procesamiento ilegal al que
hace referencia la norma fundamental del país en su art. 18 de la CPE, no es comprensivo de
la garantía del debido proceso, pues ésta encuentra protección en el art. 19 de la CPE, sino de
aquel procesamiento ilegal, es decir sin respaldo alguno en el ordenamiento jurídico, que
opera como causa para la privación de la libertad. Esto con la finalidad de evitar que a través
de un procedimiento arbitrario, se imponga una sanción o condena penal. (…) De lo dicho se
concluye que en los procesos instaurados de acuerdo al ordenamiento jurídico boliviano, en el
sentido del orden constitucional, las lesiones al debido proceso están llamadas a ser reparadas
por los mismos órganos jurisdiccionales que conocen la causa, lo que implica que quien ha
sido objeto de esa lesión, debe pedir la reparación a los jueces y tribunales ordinarios,
asumiendo activamente su rol dentro del proceso, a través de los medios y recursos que prevé
la ley, y sólo agotados éstos, se podrá acudir ante la jurisdicción constitucional a través del
recurso de amparo constitucional, que, como se ha señalado, es el recurso idóneo para
precautelar las lesiones a la garantía del debido proceso; a no ser que se constate que a
consecuencia de las violaciones al debido proceso invocadas, se colocó al recurrente en
absoluto estado de indefensión, lo que no le permitió impugnar los supuestos actos ilegales y
que recién tuvo conocimiento del proceso al momento de la persecución o la privación de la
libertad” (lo resaltado es nuestro).

Similar entendimiento, fue asumido por la SC 0619/2005 de 7 de junio, a través de la cual se


señaló lo siguiente:“a partir de la doctrina constitucional sentada en la SC 1865/2004-R, de 1
de diciembre, para que la garantía de la libertad personal o de locomoción pueda ejercerse
mediante el recurso de hábeas corpus cuando se denuncia procesamiento ilegal o indebido
deben presentarse, en forma concurrente, los siguientes presupuestos: a) El acto lesivo,
entendido como los actos ilegales, las omisiones indebidas o las amenazas de la autoridad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 266


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pública, denunciados, deben estar vinculados con la libertad por operar como causa directa
para su restricción o supresión; b) Debe existir absoluto estado de indefensión, es decir, que el
recurrente no tuvo la oportunidad de impugnar los supuestos actos lesivos dentro del proceso y
que recién tuvo conocimiento del mismo al momento de la persecución o la privación de la
libertad”. Dichos entendimientos, además, en el orden del nuevo régimen constitucional
vigente, fueron asumidos de manera uniforme por las SSCC 0012/2010-R, 0014/2010-R,
0015/2010-R y 0034/2010-R entre otras.

Por su parte, el Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de la SCP 0037/2012 de 26 de


marzo en su ratio decidendi y merced a una interpretación progresiva del presupuesto del
procesamiento indebido, señaló lo siguiente: “…tratándose de medidas cautelares de carácter
personal, no es posible exigir la concurrencia del absoluto estado de indefensión como requisito
para activar la acción de libertad, habida cuenta que, conforme lo establecieron las propias
Sentencias Constitucionales citadas (SSCC 0008/2010-R y 0080/2010-R), el actor debe agotar
los mecanismos de impugnación intraprocesales previo a la activación de la acción de libertad.
Un razonamiento contrario implicaría exigirle al accionante una situación jurídica
materialmente imposible, porque desde ya, el agotamiento de los medios de reclamación
idóneos, obliga a su participación activa en el proceso. Situación diferente, es aquella en la
que, al imputado se lo colocó en un estado absoluto de indefensión, lo que le impidió activar los
mecanismos intraprocesales referidos, circunstancia última en la que, la acción de libertad se
activará de manera directa”.

Por lo expresado precedentemente, se colige que el supuesto de procesamiento indebido


disciplinado en el art. 125 de la Constitución Política del Estado, tratándose de medidas
cautelares de carácter personal, puede ser tutelado a través de la acción de libertad, en los casos
en los que se afecte las reglas y elementos del debido proceso, siempre y cuando se cumpla con
dos aspectos esenciales: a) La directa vinculación con la libertad del elemento del debido
proceso denunciado como afectado; y b) El agotamiento de los mecanismos internos de
cuestionamiento a decisiones jurisdiccionales.

Ahora bien, en el marco de las reglas del debido proceso, corresponde determinar los
presupuestos para recusaciones establecidos en las normas adjetivas vigentes. En ese contexto,
es pertinente establecer que los presupuestos procesales de las recusaciones en procesos penales,
forman parte de las reglas de un debido proceso y su vulneración, deberá ser tutelada a través de
la acción de libertad, siempre y cuando el acto lesivo se hubiere cometido como emergencia de
la imposición de una medida cautelar de carácter personal que esté directamente vinculado con
la libertad y se hubieran agotado todos los mecanismos intraprocesales de defensa establecidos
en la normativa imperante.

En este orden, debe señalarse que el Código de Procedimiento Penal, en el marco de las reglas
de un debido proceso, disciplina el trámite de recusación, señalando taxativamente en su artículo
320 lo siguiente: “La recusación se presentará ante el juez o tribunal que conozca el proceso,
mediante escrito fundamentado, ofreciendo prueba y acompañando la documentación
correspondiente”.

Asimismo, mediante Ley 007 de 18 de mayo de 2010, denominada “Ley de Modificaciones al


Sistema Normativo Penal”, en su artículo primero, se establece las reformas parciales al Código
de Procedimiento Penal, entre las cuales se encuentra la modificación al artículo 321 del
mencionado Código, estableciendo esta ley para las excusas y recusaciones el siguiente
contenido textual: “Producida la excusa o promovida la recusación, el juez no podrá realizar en
el proceso ningún acto, bajo sanción de nulidad. Aceptada la excusa o la recusación, la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 267


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

separación del juez será definitiva aunque posteriormente desaparezcan las causales que las
determinaron”. Luego de este supuesto, de manera textual señala esta disposición: “Las excusas
y recusaciones deberán ser rechazadas in límine cuando: 1. No sea causal sobreviniente; 2.
Sea manifiestamente improcedente; 3. Se presente sin prueba en los casos que sea
necesario; o 4. Habiendo sido rechazada sea reiterada en los mismos términos” (resaltado
nos corresponde).

Ahora bien, para el establecimiento de las reglas de un debido proceso en relación al tópico de
recusaciones, es imperante interpretar a la luz de pautas exegéticas, teleológicas y sistémicas, la
disposición legal antes señalada, en ese orden, a diferencia del anterior régimen adjetivo
aplicable en materia de recusaciones, esta nueva disposición, de acuerdo al tenor literal,
introduce un aspecto adicional, es decir el rechazo in límine de recusaciones, disciplinando
específicamente los requisitos para este fin.

En ese orden, en una interpretación literal del art. 321 de la Ley 007, acorde con pautas
teleológicas y sistémicas, se tiene que la prohibición de conocimiento de ulteriores actos
procesales una vez promovida la recusación, es un presupuesto aplicable para las
recusaciones formuladas en el marco del art. 320 del CPP; empero, considerando que el
rechazo in límine no contempla las causales del art. 320 del CPP, sino por el contrario, sus
presupuestos son distintos, del tenor literal del art. 321, se establece que no existe una
regulación normativa expresa del procedimiento de rechazo in límine de recusaciones
formuladas en procesos penales, razón por la cual, de acuerdo a pautas objetivas de
interpretación, a la luz del debido proceso, deberán interpretarse los postulados a seguirse.

En el contexto señalado, siguiendo un criterio teleológico de interpretación, se tiene que el


primer supuesto del art. 321 del CPP en el marco de las causales reguladas por el art. 320
del mismo cuerpo adjetivo, cuando establece la prohibición de realización de actos
procesales ulteriores bajo sanción de nulidad, tiene una finalidad concreta, que es asegurar
el principio de imparcialidad como elemento del debido proceso. Ahora bien, la finalidad de
establecer un rechazo in límine cuando se presenten los supuestos regulados en la última
parte del artículo 321 del CPP, los cuales por su naturaleza no se encuentran contemplados
en el artículo 320, de acuerdo a una pauta teleológica y sistémica, tiene la finalidad de
evitar dilaciones procesales indebidas y asegura así la consagración del principio de
celeridad como presupuesto de un debido proceso penal.

En base al razonamiento antes esbozado, considerando que la teleología de un rechazo in límine


de recusaciones es el resguardo del principio de celeridad y por ende del plazo razonable de
juzgamiento, toda vez que su finalidad es evitar dilaciones procesales indebidas, no sería
coherente con esta interpretación teleológica, atribuirle a este supuesto los mismos presupuestos
disciplinados para la tramitación de recusaciones enmarcadas en las causales plasmadas en el
art. 320 del CPP, por cuanto, a la luz de esta interpretación teleológica, es razonable señalar
que en este supuesto (rechazo in límine), los jueces o tribunales ordinarios, precisamente
para asegurar esa celeridad procesal, en caso de enmarcarse la recusación a una causal de
rechazo in límine, deberán establecer de manera previa y motivada este rechazo, luego de
lo cual, a diferencia del primer supuesto disciplinado en el art. 321 de la Ley 007, deberán
continuar de manera inmediata con el conocimiento y resolución de la causa, aspecto que
de ninguna manera vicia de nulidad los actos procesales ulteriores.

III.2.1. Análisis del segundo acto denunciado como lesivo a los derechos del accionante

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 268


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Del contenido de la acción de libertad, se establece que el accionante, como segundo acto lesivo
a sus derechos, denuncia la realización de una segunda audiencia y la revocación de su libertad,
a pesar de estar sancionada con nulidad todos los actos efectuados después de la presentación de
una recusación.

Antes de ingresar al análisis de la problemática, es necesario establecer que los dos actos
denunciados como lesivos a través de la presente acción de libertad, tienen naturaleza
autónoma e independiente, razón por la cual, si bien en cuanto al primer acto denunciado
como lesivo no puede ingresarse al análisis de fondo de la problemática por existir identidad de
objeto, sujetos y causa; no es menos cierto que al ser el segundo acto denunciado como lesivo
diferente y autónomo al primero, su análisis merece un análisis particular que será desarrollado
infra.

En el marco de lo señalado, en la especie, de la compulsa de antecedentes se evidencia lo


siguiente: i) A horas 10:53 del 19 de diciembre de 2011, Eduardo Tussel Vega planteó
recusación contra el Tribunal de alzada, por “…interés manifiesto…” (sic), al haber expresado
su opinión sobre el proceso en la primera audiencia celebrada (fs. 20 a 21); y, ii) Los Vocales de
la Sala Penal Primera, autoridades ahora demandadas, en audiencia pública celebrada el 19 de
diciembre de 2011, rechazaron in límine la recusación interpuesta en su contra por el accionante,
en aplicación del art. 321.2 del CPP, luego de lo cual, dispusieron la detención preventiva de
Eduardo Tussel Vega por concurrir requisitos establecidos en el art. 233.1 y 2 del CPP con
relación a los arts. 235.1 y 2 y 234.6 del mismo cuerpo legal (fs. 38 a 51).

En mérito a lo señalado, se establece que esta denuncia de procesamiento indebido relacionado


con recusaciones, debe ser analizada a través de la acción de libertad, puesto que al haberse
revocado por las autoridades demandadas las medidas sustitutivas y al determinarse la detención
preventiva del accionante, los actos denunciados como lesivos están directamente vinculados
con la libertad, asimismo, en la especie, debe ingresarse al análisis de fondo de la problemática,
puesto que no existe mecanismo intra-procesal de defensa pendiente de activación.

De acuerdo a lo afirmado, es evidente que el análisis de fondo de la problemática, debe


enmarcarse a las consideraciones de orden jurídico-constitucional desarrolladas en el
Fundamento Jurídico III.2 de la presente sentencia, por tanto, al estar la problemática
relacionada con un rechazo in límine de recusación, tal como ya se explicó, las autoridades
frente a causales enmarcadas en la segunda parte del art. 321 de la Ley 007; es decir, los
supuestos de rechazo in límine de recusaciones, una vez dispuesto el rechazo in límine, deben
continuar de manera inmediata con el conocimiento y resolución de la causa,
procedimiento aplicado en la especie tal como lo evidencia las documentales detalladas
supra, razón por la cual, se colige que en el caso concreto, no existió vulneración a
presupuestos del debido proceso y por tanto, no existió procesamiento indebido.

Por los fundamentos expuestos, se concluye que el Juez de garantías al haber denegado la
acción de libertad, evaluó correctamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y de conformidad con el
art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 269


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

1º APROBAR, la Resolución 01/12 de 6 de enero de 2012, cursante de fs. 95 vta. a 97,


pronunciada por el Juez Quinto de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa
Cruz; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

2º Al establecer una interpretación del régimen de recusaciones en el nuevo orden


constitucional, se instruye a Secretaría General, proceder a su difusión.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0039/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00063-2012-01-AAC
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 001/2012 de 26 de enero, cursante de fs. 158 a 161, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Margoth Arriaga Damm,
Alcaldesa de San Ramón contra Marlene Arteaga Vaca y Percy Augusto Solares Chávez,
Vocales de la Sala Civil del Tribunal Departamental de Justicia del Beni.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 18 de enero de 2012, cursante de fs. 141 a 146 vta., la accionante
expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Los vocales demandados, pronunciaron el Auto 184/11 de 29 de noviembre de 2011, por el cual
declararon infundado el recurso de casación interpuesto contra el Auto de Vista 09/11 de 16 de
mayo de 2011 dictado por el Juez Segundo de Partido en lo Civil, recurso que se fundamentó en
los siguientes hechos: a) El Auto de apertura de término de prueba, solo fija los puntos a ser
probados por la demandante, no así los de la parte demandada, lo que vulnera los derechos a la
defensa y al debido proceso, por lo que correspondía disponer nulidad de obrados; b) El Auto de
Vista impugnado no se basó en los hechos expuestos en la Sentencia y que fueron objeto de
apelación, sino en otros que jamás fundaron la demanda, que no fueron objeto de prueba,
tampoco apelados, c) El ad quem violó el Estatuto del Funcionario Público, al afirmar en el Auto
de Vista que los demandantes al tener la calidad de 'servidores públicos de libre nombramiento o
provisorios', se encuentran protegidos por la estabilidad laboral, por lo que no podían ser
despedidos sin justificativo legal, y que al haberlo sido, correspondía el pago de daños y
perjuicios, cuando dicho Estatuto a esta clase de servidores no les reconoce el derecho a la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 270


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

estabilidad laboral, menos el pago de daños y perjuicios por resolución del contrato antes del
vencimiento del plazo de vigencia; y, d) El ad-quem al confirmar la Sentencia porque la
demandada no probó que la Resolución del contrato fue justificada, violó el art. 375.1 del
Código de Procedimiento Civil (CPC), ya que los demandantes al no haber probado que su
contrato se regía por el Código Civil y que les asistía el derecho al pago de daños y perjuicios,
de su parte, no se encontraba obligada a probar el hecho impeditivo de los derechos de los
demandantes.

Afirma que los puntos antes expuestos están debidamente fundamentados en el recurso de
casación, pese a ello, los Vocales lejos de pronunciarse al respecto, deciden simplemente
declarar infundado el recurso, en base a lo siguiente: 1) Al no haber apelado el Auto de apertura
de término de prueba, la instancia de impugnación se encontraba precluida; 2) El
reconocimiento de daños y perjuicios deviene de la ruptura unilateral del contrato que hizo la
institución demandada, por lo que corresponde el pago de salarios por los meses
comprometidos; 3) El contrato se enmarca en los alcances del art. 5 del Estatuto del Funcionario
Público (EFP), por lo que los términos que regulan la relación contractual, son los establecidos
en el contrato; y, 4) El hecho de que el contrato no se encuentre en los alcances de la Ley
General del Trabajo o del Estatuto del Funcionario Público, no importa por sí, que al actor le
asista el derecho a la reparación de los daños sufridos por la resolución del contrato conforme a
la norma civil. En consecuencia, los Vocales demandados no se pronunciaron respecto a los
hechos descritos en los puntos 2, 3 y 4 de los fundamentos del recurso de casación, vale decir,
sobre la violación de los arts. 236 y 375.1 del CPC y 7 del EFP, vulnerando la garantía del
debido proceso.

Agrega que los Vocales demandados, al haber condenado a la Alcaldía de San Ramón al pago de
daños y perjuicios a favor de los demandantes, por haber resuelto un contrato de trabajo sin
justificación alguna, violaron los arts. 2, 3, 4, 5 y 7 del EFP, pues en el Auto de Vista
impugnado se llegó a la conclusión de que los contratos de trabajo de los demandantes están
enmarcados en el art. 5 inc. c) del EFP, cuando al haber sido funcionarios de libre
nombramiento, tenían la calidad de servidores públicos, lo que importaba que su relación laboral
se encontraba regida en el ámbito del Estatuto del Funcionario Público y no por los términos y
condiciones estipulados en el contrato, ya que estos funcionarios no se sujetan a las
disposiciones relativas a la carrera administrativa, al tratarse de personal de confianza y
asesoramiento técnico especializado, donde su contratación opera de manera directa y no se
encuentran garantizados por la estabilidad laboral, lo que permite puedan ser retirados sin previo
aviso y sin necesidad de justificativo legal alguno, por lo que al haber condenado al pago de
daños y perjuicios por resolución unilateral del contrato de trabajo siete meses antes de su
conclusión, obligando a cancelar la totalidad de los sueldos comprometidos, se vulneró el
“derecho” a la seguridad jurídica.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante estima vulnerados los derechos al debido proceso y a la “seguridad jurídica”, sin
citar norma alguna.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda el amparo y se disponga la nulidad del Auto 184/11 de 29 de noviembre de


2011.

I.2. Audiencia y resolución del Tribunal de garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 271


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Efectuada la audiencia pública el 26 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
155 a 161, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la accionante ratificó el tenor de la demanda.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Marlene Vaca Arteaga y Percy Solares Chávez, Vocales de la Sala Civil del Tribunal
Departamental de Justicia del Beni, brindaron informe por escrito que cursa de fs. 153 a 154 y
vta., señalando: i) Respecto a que el Auto de relación procesal sólo fijó hechos a probar para el
demandante y no para el demandado, en el Auto impugnado señalaron expresamente que el
mismo pudo ser objeto de apelación conforme al art. 371 del CPC, que la accionante no hizo uso
oportuno, por lo que es aplicable el principio de preclusión y/o convalidación; ii) Sobre la
casación en el fondo, al haber sus autoridades confirmado los fallos de instancia, dichos jueces
como causantes del supuesto agravio, también tiene legitimación pasiva para esta acción; iii) Las
consideraciones legales respecto a que el pago de daños y perjuicios, fuera contrario al Estatuto
del Funcionario Público, así como la ausencia de prueba sobre la naturaleza civil de la acción y
la calidad de funcionarios públicos de los actores, corresponde a los jueces de instancia y a sus
autoridades como tribunal de casación, según establece la SC 1461/2011-R, cuando señala que
la interpretación de la legalidad es responsabilidad y atribución únicamente de los tribunales
ordinarios que conoce la causa, siendo que conforme a la misma Sentencia, para que el Tribunal
de garantías pueda cumplir la labor de revisión de la interpretación de la legalidad ordinaria, es
necesario que la parte procesal que se considere agraviada, exprese de manera adecuada y
precisa los fundamentos jurídicos, exponiendo con claridad y precisión los principios o criterios
de interpretación que no fueron cumplidos o desconocidos; iv) En este caso, la acción no cumple
en lo mínimo tales presupuestos, tampoco los accionantes en el curso del proceso opusieron
excepción alguna de incompetencia, ni presentaron pruebas, habiéndose apersonado luego de
purgar su rebeldía para deducir recurso de apelación de la Sentencia; v) No es pertinente
observar la competencia de los jueces que conocieron el proceso ordinario cuando en su
oportunidad no lo hicieron, más aún cuando la valoración de la prueba respecto a dicha
competencia u otros aspectos del proceso, corresponde a los jueces y tribunales ordinarios, como
señala la SC 1140/2011-R; y, vi) En el fondo de la litis se remitieron al contrato y a los
antecedentes del proceso, concluyendo que la ruptura unilateral del mismo, debe ser sancionada
con la reparación de daños y perjuicios establecidos en la Sentencia.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal del Tribunal Departamental de Justicia del Beni, constituido en Tribunal de
garantías, dictó la Resolución 001/2012 de 26 de enero, cursante de fs. 158 a 161, por la cual
denegó la tutela, “sin multas, daños y perjuicios” (sic) con los siguientes fundamentos: a) De la
valoración de los hechos se concluye que el contrato que motivo el proceso ordinario es de
naturaleza mixta, pues por un lado rige conforme a las reglas del Estatuto del Funcionario
Público y por otro tiene caracteres propios de los contratos civiles; b) En el presente amparo se
plantea la protección de dos derechos, el debido proceso y la seguridad jurídica, este último dejo
de ser derecho en el marco de la nueva Norma Fundamental, por lo que solo toca analizar el
tema relativo al debido proceso; c) No es desproporcionada, arbitraria ni con error evidente la
interpretación de la naturaleza mixta del contrato sobre la que versó el Juez de apelación, pues
en el fondo, los terceros interesados no piden reincorporación, tampoco beneficios sociales,
resultando razonable que por la resolución del contrato sin ninguna justificación se tenga que

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 272


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

demandar la reparación de daños y perjuicios; y, d) Se solicitó la casación del Auto de Vista


declarando improbada la demanda o en su caso nulidad de obrados hasta dictarse nuevo auto de
apertura de término de prueba, cuando la demandada no recurrió en su momento, precluyendo su
derecho.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. En el proceso sumario sobre pago de daños y perjuicios por resolución unilateral de
contrato, instaurado por Petronila Zema Paz y Horacio Nilaca Huasico, representados
legalmente por Claudia Ortiz Villarroel, contra la Alcaldía Municipal de San Ramón,
representada por la Alcaldesa Margoth Arriaga Damm, ahora accionante; el Juez Primero de
Instrucción en lo Civil de la Capital, dictó la Sentencia 37/10 de 22 de noviembre de 2010, por
la que declaró probada la demanda, ordenando el pago a la institución demandada de Bs6 060.-
(seis mil sesenta bolivianos) y Bs16 160.- (dieciséis mil ciento sesenta bolivianos) en favor de
los demandantes, respectivamente (fs. 79 a 82 vta.).

II.2. Por memorial presentado el 18 de diciembre de 2010, Margoth Arriaga Damm, Alcaldesa
Municipal de San Ramón, purgando su rebeldía, se apersonó al proceso e interpuso recurso de
apelación de la Sentencia (fs. 100 a 105 vta.). Previa contestación de la parte demandante (fs.
108 a 109), por Auto de 12 de enero de 2011, se concedió el recurso por ante el superior en
grado (fs. 110).

II.3. Por Auto de Vista 09/2011 de 16 de mayo, el Juez Segundo de Partido en lo Civil,
confirmó la Sentencia apelada, en cuanto a la condenación del monto de Bs6 060.- a favor de
Petronila Zema Paz y Bs16 160.-, indicando como beneficiario a Horacio Nilaca Huasico (fs.
115 a 117).

II.4. En el memorial presentado el 20 de julio de 2011, la accionante, en representación de la


Alcaldía de San Ramón, interpuso recurso de casación en la forma y en el fondo, contra el Auto
de Vista 09/2011, en base a los siguientes argumentos: 1) Al no haberse fijado los puntos de
hecho a probar por la parte demandada, se debió disponer la nulidad de obrados; 2) El Auto de
Vista se basa en hechos que jamás llegaron a fundar la demanda y que tampoco fueron objeto de
prueba, habiendo actuado ultra petita; 3) El haber determinado el Juez que los demandantes eran
“servidores públicos de libre nombramiento o provisorios”, importaba que la relación laboral de
los mismos se encuentre regida por el Estatuto del Funcionario Público, por lo que al ser
despedidos aunque de manera injustificada, no les asistía el derecho de pago de sueldos por el
tiempo que faltaba para la conclusión del contrato; y, 4) Al haber llegado el Juez al
convencimiento de que los contratos de trabajo de los demandantes no se encontraban regidos
por las normas del Código Civil, sino por el Estatuto del Funcionario Público, debió declarar
improbada la demanda (fs. 122 a 125). El recurso de casación fue concedido por Auto de 30 del
mismo mes y año (fs. 128).

II.5. La Sala Civil del Tribunal Departamental de Justicia del Beni, por “Auto de Vista” 184/11
de 29 de noviembre de 2011, declaró infundado el recurso de casación, con los siguientes
fundamentos: i) El Auto que traba la relación procesal y fija los puntos de hecho a probar, no fue
objeto de observación alguna; ii) El reconocimiento de daños y perjuicios deviene de la ruptura
unilateral del contrato realizado por la institución demandada, por cuya consecuencia
corresponde el pago de salarios por los meses comprometidos; iii) El contrato, tal cual señala el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 273


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Auto recurrido y lo precisa la demanda, se enmarca en el art. 5 del EFP, por lo que los términos
que regulan la relación contractual, son los establecidos en dicho contrato; y, iv) El hecho de que
no se encuentre dentro los alcances de la Ley General del Trabajo o del Estatuto del Funcionario
Público, no importa por sí, el derecho que asiste al actor para la reparación de los daños sufridos
por la decisión del Alcalde de resolución del contrato al amparo de la norma civil (fs. 135 a
136).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia la vulneración de los derechos al debido proceso y a la “seguridad


jurídica”, aduciendo que los Vocales demandados declararon infundado su recurso de casación,
sin que se hayan pronunciado sobre los puntos 2, 3 y 4 expuestos en el memorial de
interposición, respecto a la violación de los arts. 236 y 375.1 del CPC y 7 del EFP, pues
condenaron a la Alcaldía de San Ramón, al pago de daños y perjuicios por haber resuelto un
contrato de trabajo sin justificación alguna, cuando por tratarse de funcionarios de libre
nombramiento, su relación laboral se regía en el ámbito del Estatuto del Funcionario Público y
no por los términos y condiciones estipulados en el contrato, lo que permitía puedan ser
retirados sin previo aviso, ni justificativo legal alguno, por lo que no podían ser obligados a
cancelar la totalidad de los sueldos comprometidos. En consecuencia, corresponde en revisión,
verificar si tales extremos son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional no es una instancia procesal adicional que forme
parte de las vías legales ordinarias

La acción de amparo constitucional prevista por el art. 128 de la Constitución Política del Estado
(CPE), ha sido instituida contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman, o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley; constituye un medio de tutela de
carácter extraordinario, regido por los principios de subsidiariedad e inmediatez.

Consecuentemente, dado este su carácter extraordinario, la acción de amparo constitucional no


puede ser considerada como un medio de defensa o recurso alternativo, sustitutivo,
complementario o una instancia adicional que forme parte de las vías legales ordinarias de
impugnación, a la que puedan acudir los litigantes perdidosos frente a una determinación
judicial que les resulte adversa, pues esta acción tutelar fue concebida más bien como un
mecanismo subsidiario de defensa de los derechos fundamentales. En ese sentido, la SC
1358/2003-R de 18 de septiembre, estableció: “…el amparo constitucional es una acción de
carácter tutelar, no es un recurso casacional que forme parte de las vías legales ordinarias, lo
que significa que sólo se activa en aquellos casos en los que se supriman o restrinjan los
derechos fundamentales o garantías constitucionales, por lo mismo no se activa para reparar
supuestos actos que infringen las normas procesales o sustantivas, debido a una incorrecta
interpretación o indebida aplicación de las mismas”.

III.2. Sobre la interpretación de la legalidad ordinaria y la valoración de la prueba como


atribución de la jurisdicción común

III.2.1. Interpretación de la legalidad ordinaria

De otro lado, cabe señalar que la jurisdicción constitucional, dada su naturaleza y fines, está
impedida de revisar o sustituir por otra la interpretación de la legalidad ordinaria realizada con
plenitud de jurisdicción y competencia por los jueces y tribunales de la jurisdicción común, en el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 274


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conocimiento y resolución de los casos sometidos a su conocimiento, puesto que la potestad de


impartir justicia que emana del pueblo boliviano, conforme al art. 178.I de la CPE se sustenta,
entre otros, en los principios de independencia, imparcialidad, seguridad jurídica, probidad,
pluralismo jurídico, interculturalidad, equidad; de donde la labor que el orden constitucional
reconoce a los jueces y tribunales, no puede ser perturbada con la utilización de acciones
constitucionales, con un mero afán dilatorio, buscando prolongar injustificadamente la
resolución de los procesos, a menos que medie una evidente lesión de derechos y garantías
constitucionales, fruto de una interpretación arbitraria, carente de fundamentación suficiente o
con error evidente.

En ese sentido, la SC 0846/2010-R de 10 de agosto, respecto a la interpretación y aplicación de


la legalidad ordinaria por los jueces y tribunales, ha establecido que: “…toda supuesta
inobservancia o errónea aplicación de la misma ser corregida a través de la jurisdicción
ordinaria; atañéndole únicamente a la jurisdicción constitucional, (…) `…en los casos en que se
impugne tal labor como arbitraria, insuficientemente motivada o con error evidente, el estudio,
dentro de las acciones de tutela, de la decisión impugnada, a los efectos de comprobar si la
argumentación jurídica en la que se funda la misma es razonable desde la perspectiva
constitucional -razonamiento que debe ajustarse siempre a una interpretación conforme a la
Constitución- o si por el contrario, se muestra incongruente, absurda o ilógica, lesionando con
ello derechos fundamentales o garantías constitucionales…'”.

En ese orden, la citada Sentencia Constitucional, acotó que para que la jurisdicción
constitucional ingrese a revisar la interpretación de la legalidad ordinaria efectuada por el órgano
jurisdiccional, es imprescindible que el agraviado: “'…1. Explique por qué la labor
interpretativa impugnada resulta insuficientemente motivada, arbitraria, incongruente, absurda
o ilógica o con error evidente, identificando, en su caso, las reglas de interpretación que fueron
omitidas por el órgano judicial o administrativo; y, 2. Precise los derechos o garantías
constitucionales que fueron lesionados por el intérprete, estableciendo el nexo de causalidad
entre éstos y la interpretación impugnada; dado que sólo de esta manera la problemática
planteada por el recurrente, tendrá relevancia constitucional'”. Con similar razonamiento, la
SC 1758/2010-R de 25 de octubre, entre muchas otras.

III.2.2. Valoración de la prueba

Asimismo, el Tribunal Constitucional Plurinacional, al no ser una instancia adicional o


suplementaria de los procesos, sino más bien de tutela de los derechos fundamentales; en los
casos de las acciones de defensa, no tiene atribución para la valoración de prueba sobre el fondo
del asunto de donde emerge la acción tutelar, puesto que ello es también atribución exclusiva de
los jueces y tribunales ordinarios, a menos que como resultado de esa valoración se hayan
lesionado derechos y garantías constitucionales por apartamiento de los marcos legales de
razonabilidad y equidad o cuando se hubiere omitido arbitrariamente valorar una prueba. Sobre
el particular, a través de la SC 0906/2010-R de 10 de agosto, se señaló lo siguiente: “Respecto a
este punto corresponde remitirse a la jurisprudencia de este Tribunal, en sentido de que la
valoración de la prueba en asuntos de fondo de procesos judiciales o administrativos,
corresponde a la jurisdicción ordinaria o administrativa competente, no así al Tribunal
Constitucional, dada su finalidad protectora de derechos fundamentales y no de instancia de
apelación o casacional. Una de las tantas Sentencias Constitucionales que en la presente
gestión han asumido este entendimiento, es la SC 0083/2010-R de 4 de mayo, que en lo
pertinente refiriéndose a la finalidad de la acción tutelar, señaló que: '(…) Ese es el
entendimiento que siempre tuvo y tiene este Tribunal, puesto que existe línea jurisprudencial en
sentido de que: '…la facultad de valoración de la prueba aportada corresponde privativamente

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 275


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

a los órganos jurisdiccionales ordinarios, por lo que el Tribunal Constitucional no puede


pronunciarse sobre cuestiones que son de exclusiva competencia de los jueces y tribunales
ordinarios, y menos atribuirse la facultad de revisar la valoración de la prueba que hubieran
efectuado las autoridades judiciales competentes' SSCC 577/2002-R y 0977/2003-R, entre otras;
es decir que la competencia en acciones de tutela '…sólo alcanza a determinar -siempre que
exista la acción del agraviado-, si han existido violaciones a derechos y garantías
fundamentales dentro de un proceso por inobservancia de normas de orden procesal o
sustantivas, pero no así a determinar si existen elementos de juicio suficientes para someter a
proceso penal a la persona contra la que se hubiere presentado la acción penal...' SC
0938/2005-R de 12 de agosto. Por tanto este Tribunal no puede ingresar a la valoración de la
prueba. Si bien esta subregla '…tiene su excepción, cuando en dicha valoración: a) Exista
apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad previsible para decidir (…) o b)
Cuando se haya omitido arbitrariamente valorar la prueba y su lógica consecuencia sea la
lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales…' (SC 0965/2006-R de 2 de
octubre). Tampoco se dan éstas situaciones, pues el demandante no apoya, fundamenta ni
prueba ninguna de las dos excepciones”.

III.3. Análisis del caso concreto

Conforme se tiene establecido de los antecedentes que cursan en obrados, la acción de amparo
constitucional que ahora se revisa, emerge de un proceso de carácter sumario sobre pago de
daños y perjuicios por resolución unilateral de contrato, sustanciado entre la representante legal
de Petronila Zema Paz y Horacio Nilaca Huasico y la Alcaldía Municipal de San Ramón,
representada por la accionante en calidad de Alcaldesa; litigio en el cual se dictó Sentencia de
primera instancia declarando probada la demanda, etapa a la cual por lo demás, no se apersonó
la entidad demandada y por ende no asumió defensa alguna, ni opuso excepciones a través de las
cuales bien pudo revertir en su momento muchos de los aspectos ahora cuestionados,
incurriendo así en negligencia que ha derivado además en la aplicación del principio de
preclusión; asumiendo defensa recién a tiempo de interponer recurso de apelación y luego de
purgar su rebeldía, recurso que motivo el Auto de Vista correspondiente que confirmó la
Sentencia apelada en cuanto a los montos a cancelar a los demandantes por concepto de daños y
perjuicios por la rescisión; y que habiéndose recurrido de casación de dicha Resolución, los
vocales ahora demandados declararon infundado el recurso. Vale decir, que se trata de un
proceso concluido en todas sus fases posibles conforme a la normativa procesal civil, donde
cada una de las Resoluciones de instancia y de casación resultaron adversas a la entidad
representada por la accionante, quien al no contar ya más con ningún recurso o medio legal para
revertir esa situación ante la jurisdicción ordinaria, pretende utilizar el amparo constitucional
como una instancia procesal adicional o complementaria, lo que conforme se vio, no condice
con la naturaleza de esta acción tutelar, pretendiendo a la par que la jurisdicción constitucional,
ingrese a revisar la interpretación de la legalidad ordinaria realizada por los jueces y tribunales
de instancia, con relación a las normas legales a ser aplicadas en la litis, así como de las pruebas
aportadas en cuanto a la validez o no del contrato en cuestión y sus alcances, labor que según se
dijo, atañe a los jueces y tribunales ordinarios con plenitud de jurisdicción y competencia, sin
que la accionante haya cumplido con las sub reglas que de acuerdo a la jurisprudencia
constitucional permitirían ingresar a examinar dicha revisión, limitándose simplemente a
expresar su propia interpretación y valoración en cuanto a los alcances de la normativa inherente
a los servidores públicos y la inaplicabilidad de los términos y condiciones estipulados en los
contratos que fueron aportados como prueba por la parte demandante en el proceso.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la acción tutelar, aunque con otros


fundamentos, ha actuado correctamente.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 276


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud a la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de
conformidad con el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve:

1º DENEGAR la tutela solicitada.

2º Se llama la atención al Tribunal de garantías por haber remitido los antecedentes para
revisión, fuera del plazo establecido en el art. 129.IV de la CPE.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0040/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00015-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 15/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 190 a 193 vta. pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Clemente Oña Quiroga contra
Esteban Urquizu Cuéllar y Emerson Mirko Martínez Tapia, Gobernador y Juez
Sumariante, respectivamente ambos del Gobierno Autónomo de Chuquisaca.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURIDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 9 de enero de 2012, cursante de fs. 54 a 64 vta., el accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Mediante contrato de prestación de servicios RR.HH. 302/2011 de 4 de febrero, suscrito con la


Gobernación de Chuquisaca, representada por Esteban Urquizu Cuéllar, fue designado como Profesional
II dependiente de la Unidad de Ordenamiento Territorial y Límites; sin embargo, desconociendo
totalmente las normas de protección a la persona con discapacidad, fue destituido de su fuente laboral, a
cuyo efecto planteó una acción de amparo constitucional, donde la Sala Penal del Tribunal
Departamental de Justicia de Chuquisaca, a través del Auto 32/11 de 25 de enero de 2011, le concedió la
tutela solicitada; pero, a pesar de ello, a los pocos meses la autoridad demandada procedió nuevamente a
destituirlo, cometiendo una serie de arbitrariedades, desarrolladas a continuación.

a) En cuanto al proceso administrativo interno

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 277


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Al no existir motivo para iniciarle un proceso administrativo interno, el Secretario Departamental


Jurídico, Juan Pablo Yucra Gamboa y al Jefe de Recursos Humanos, Demetrio Daza, ambos del
Gobierno Autónomo de Chuquisaca, idearon un plan para su destitución a través de un forzado proceso
administrativo interno; ya que mediante comunicación interna JRRHH 022/2011 de 28 de marzo, le
reasignaron funciones con las cuales no estuvo de acuerdo, representando tal situación, fue sancionado
con tres memorándums de llamadas de atención 008 de 29 de marzo, 009 de 4 de abril y 0010 de 11 de
abril todos de 2011, sin habérsele previamente iniciado un proceso administrativo interno, e incurriendo
además en una serie de actos ilegales, vulnerando el derecho a la seguridad jurídica, las garantías al
debido proceso y la presunción de inocencia. Posteriormente, habiendo formulado recurso de
revocatoria contra los actos ilegales de Demetrio Daza, recurso que no fue resuelto dentro de plazo;
por lo cual, presentó recurso jerárquico, sin embargo, el Jefe de Recursos Humanos, Demetrio
Daza, no remitió antecedentes ante la Máxima Autoridad Ejecutiva (MAE) del Gobierno
Autónomo de Chuquisaca; entonces, como no dictó resolución dentro de plazo, operó el silencio
administrativo positivo; es decir, que se tiene por aceptado el recurso y por ende revocados los
actos administrativos impugnados.

Por otra parte, señala que, mediante acta de verificación de notificación a Clemente Oña, la Notaria
de Fe Pública de Primera Clase, Mónica Caballero Asebey, el 5 de enero de 2012, pudo dar fe de
que el memorial del recurso jerárquico de 24 de mayo de 2011, no fue derivado para su resolución
ante la MAE del Gobierno Autónomo de Chuquisaca, sino, erróneamente se derivó a la Unidad
Jurídica.

b) En lo referente a la Resolución 010/2011 de 18 de abril, de apertura del proceso sumario


administrativo

El accionante refiere haber sido notificado con la apertura del proceso sumario administrativo -
Resolución 10/2011 de 18 de abril-, seguido en su contra por el Juez Sumariante, Germán Espada,
por la presunta contravención de los arts. 8 del Estatuto del Funcionario Público (EFP); 3 y 7 inc.
e) del Decreto Supremo (DS) 23318-A y 49 del Estatuto del Funcionario Prefectural (vigente en
ese entonces), el cual fue llevado a cabo con una serie de ilegalidades, como ser: a) La autoridad
Sumariante, Germán Espada, no tenia competencia para sustanciar y resolver el proceso
administrativo incoado contra su persona; b) La Resolución 010/2011 de 12 de mayo, dictada por
la anterior autoridad sumariante, carece de fundamentación y motivación, vulnerándose así la
garantía del debido proceso y este acto administrativo omisivo, impidió que asuma una adecuada
defensa; c) Demetrio Daza nunca remitió a la MAE, el recurso jerárquico interpuesto por el
accionante; y, d) No se advierte la valoración que el Sumariante otorgó a los elementos probatorios
respecto a las pruebas de descargo.

c) En lo concerniente a la Resolución Administrativa Gubernamental 213 de 1 de julio de


2011

El Gobernador del departamento de Chuquisaca, Esteban Urquizu Cuéllar, resolvió el recurso


jerárquico mediante la Resolución Administrativa Gubernamental 213, en cuya parte resolutiva no
se pronunció en relación a la Resolución impugnada, al estar vencido el plazo establecido en el art.
67.I y II de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA) y al no haber resuelto el recurso
jerárquico interpuesto, operó el silencio administrativo positivo. Asimismo refiere, que dicha
Resolución carece de elementos normativos, como el de fundamentación y motivación.

Por lo expuesto, señala que según el carnet presentado por el accionante, tiene una discapacidad
física-motora en un porcentaje de 32% y conforme al art. 5.I del DS 29608 de 14 de octubre de
2009, goza de estabilidad e inamovilidad laboral; por lo que busca la tutela efectiva también del

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 278


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derecho al trabajo, puesto que no sólo afecta al bienestar de su persona sino también a su entorno
familiar.

Finalmente el accionante refiere, haber sido notificado con la última decisión administrativa el 8 de
julio de 2011 y encontrándose la presente acción interpuesta dentro del plazo de los seis meses,
establecidos por el art. 129.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante considera lesionados los derechos a la vida, a la salud, al trabajo, a la defensa, a la


seguridad jurídica, a la presunción de inocencia y la garantía del debido proceso, citando al efecto los
arts. 15.I, 18, 46.I, 115.I y II, 116.I, 117.I y 178.I de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, restituyéndole sus derechos constitucionales conculcados y en


consecuencia:

1) Dejar sin efecto: La Resolución de apertura de proceso sumario Administrativo Resolución


010/2011 de 18 de abril, la Resolución Final del Sumario instaurado a Clemente Oña Quiroga
010/2011 de 12 de mayo, la Resolución del Recurso de Revocatoria 015/2011 de 3 de junio, y la
Resolución Administrativa Gubernamental 213 de 1 de julio de 2011.

2) Y se disponga: Su inmediata reincorporación a su mismo cargo de Profesional II, dependiente


de la Unidad de Ordenamiento Territorial y Límites; la cancelación de sus haberes devengados,
desde su destitución ilegal hasta el momento efectivo de su reincorporación; y, la calificación y
cancelación de daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 187 a
189 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante se ratificó in extenso en los términos expuestos en el memorial de


interposición de la acción.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionarios demandados

Mediante informe de 17 de enero de 2012, cursante de fs. 179 a 183, Emerson Mirko Martínez
Tapia, Alfredo Martínez y Wilson Meneses Zelaya en representación legal de Esteban Urquizu
Cuéllar, Gobernador del departamento de Chuquisaca refieren lo siguiente: i) La presente acción
debe ser interpuesta en el plazo de los seis meses computables a partir de la comisión de la
vulneración alegada o de notificada la última resolución administrativa o judicial, conforme lo
establecen los arts. 129.II de la CPE y 59 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP); por tanto, el accionante fue notificado con la Resolución Administrativa (RA) 213/2011
de 1 de julio, emitida por el Gobernador del departamento de Chuquisaca, el 8 de julio de 2011 y la
acción de amparo constitucional fue presentada el 9 de enero de 2012; es decir, a los seis meses y
un día de la emisión de la última decisión administrativa; por lo que, se encuentra fuera de plazo;
ii) A través de la acción de amparo constitucional, el accionante ha impugnado la RA 010/2011, la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 279


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Resolución del recurso de revocatoria 15/2011 y la Resolución Administrativa Gubernamental


213/2011, sin antes haber agotado la vía administrativa, ya que no interpuso el recurso jerárquico
conforme prevé los arts. 28 y 29 del Reglamento de Impugnación al Régimen Laboral de las
Servidoras y los Servidores Públicos 14/2010 de 18 de febrero, contra los memorándums 008, 009
y 010/2011, que dieron lugar al proceso administrativo; iii) La acción no fue dirigida contra la ex
autoridad Sumariante del Gobierno Autónomo de Chuquisaca, Germán Espada, quien habría
incurrido en la restricción de sus derechos fundamentales, refiere que la acción de amparo
constitucional, debe dirigirse contra la persona que ocasionó la lesión del derecho; iv) El
accionante tenía todas las prerrogativas para plantear un recurso directo de nulidad en su debido
tiempo; v) El accionante hace referencia como fundamento legal de su acción a la Ley del Tribunal
Constitucional, la misma que no se encuentra vigente; vi) Dentro del proceso administrativo
interno, el accionante ha incurrido en una serie de incumplimientos a las instrucciones de la
Jefatura de Recurso Humanos, siendo que a raíz de la comunicación interna 22/2011, dispuso que
éste preste apoyo a la Secretaría Departamental Jurídica con el mismo cargo de Abogado Asesor y
nivel salarial, al no cumplir lo encomendado fue sujeto de tres llamadas de atención, vulnerando las
normas que regulan las funciones del servidor público, de acuerdo al art. 235 de la CPE, toda vez
que la instrucción fue emitida por un superior. En consecuencia según refiere el art. 29 de la Ley de
Administración y Control Gubernamental (LACG); 18 y ss. del DS 23318-A, modificado por el
DS 26327 de 29 de junio de 2001, la ex autoridad sumariante del Gobierno de Chuquisaca
sustanció el proceso administrativo interno con todos los actos procedimentales que impone la
norma; y, vii) Finalmente, la presente acción debe ser declarada improcedente in límine por
incumplimiento a los principios de inmediatez y subsidiariedad; por ende, no tendría objeto entrar
a valorar el proceso administrativo sustentado en su contra. En ese entendido, solicita denegar la
tutela solicitada, con la imposición de costas y multas conforme previene la Ley del Tribunal
Constitucional.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituida en


Tribunal de garantías mediante Resolución 15/2012 de 17 de enero, cursante de fs. 190 a 193 vta.,
denegó la acción planteada, en base a los siguientes fundamentos: a) Se establece que fueron
emitidas tres llamadas de atención por memorandos 008, 009 y 010/2011, cursantes de fs. 21 a 23,
por el Jefe de Recursos Humanos del Gobierno de Chuquisaca, Demetrio Daza; sin embargo, no se
dirigió la presente acción contra dicho funcionario público; b) Germán Espada, emitió la
Resolución de Apertura del proceso sumario administrativo 10/2011 de 18 de abril, y no fue
demandado en la presente acción, siendo que el art. 77 de la LTCP, establece los requisitos que
debe contener la acción de amparo constitucional; y, c) Finalmente sostienen que ese Tribunal, no
puede ingresar al análisis de fondo de la acción planteada, puesto que no fueron demandados
Demetrio Daza y Germán Espada, pese a haber sido nombrados en la presente acción.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan
seguidamente:

II.1. Mediante Resolución Administrativa Gubernamental 213, emitida dentro del proceso sumario
administrativo instaurado contra Clemente Oña Quiroga, se confirmaron la Resolución Final de la
Autoridad Sumariante 010/2011 y la Resolución al recurso de revocatoria 015/2011 de 3 de junio,
ambas emitidas por el Sumariante del Gobierno Autónomo de Chuquisaca (fs. 150 a 156).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 280


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. Por diligencia de 8 de julio de 2011, se ejecutó la notificación con intervención notarial, de la
Resolución Administrativa Gubernamental 213 (fs. 51 vta.).

II.3. A través de memorial presentado el 9 de enero de 2012, el accionante interpuso la presente


acción de amparo constitucional (fs. 54 a 64 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que se han vulnerado los derechos a la vida, a la salud, al trabajo, al debido
proceso, a la presunción de inocencia y a la seguridad jurídica, siendo que al ser una persona
discapacitada goza de estabilidad e inamovilidad laboral; sin embargo, sostiene que mediante
actos administrativos ilegales fue destituido de su fuente laboral y pese a haber recurrido a la vía
administrativa, mediante Resolución Administrativa Gubernamental 213 confirmaron la
Resolución Final de la Autoridad Sumariante 10/2011 de 12 de mayo y consiguientemente la
Resolución del recurso de revocatoria 15/2011 de 3 de junio, mismas que dispusieron la
destitución de su fuente laboral.

En consecuencia corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de


conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y alcance

La acción de amparo constitucional consagrada por el art. 128 de la CPE, se instituye por la Norma
Fundamental como una acción tutelar de defensa contra actos u omisiones ilegales o indebidos de
los servidores públicos o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen
restringir o suprimir los derechos reconocidos por la misma Constitución Política del Estado y la
ley.

Asimismo, el art. 129.I de la CPE, establece que: “…se interpondrá por la persona que se crea
afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo
con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados”, entendido como el principio de subsidiariedad, interpretándose que si previamente
no se agoto la vía judicial o administrativa, no puede activarse la acción de amparo constitucional,
advirtiendo en el parágrafo II del citado art. 129 el principio de inmediatez; es decir, que esta
acción debe ser interpuesta en el plazo máximo de seis meses a computarse a partir del
conocimiento del hecho, o de emitida la última resolución administrativa o judicial que causó el
agravio.

De manera específica, la jurisprudencia constitucional en cuanto al principio de inmediatez, refirió


a través de la SC 0792/2007-R de 2 octubre que: “su naturaleza emana de la necesidad de otorgar
una protección inmediata y eficaz a los derechos y garantías que han sido lesionados y por lo
mismo, el supuesto quebrantamiento o lesión de estos derechos; en ese sentido el plazo para
presentar la acción de amparo constitucional es de seis meses como término máximo de ocurrido
el acto ilegal u omisión indebida o de agotados los medios y recursos judiciales ordinarios o
administrativos idóneos para hacer cesar el acto”.(las negrillas nos corresponden)

III.2. La extemporaneidad en la protección de la acción de amparo constitucional

Al efecto, la SC 1157/2003-R de 15 de agosto, que señala: “…por principio general del derecho
ningún acto procesal puede pretender que el órgano jurisdiccional esté a su disposición en

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 281


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

forma indefinida, sino que sólo podrá estarlo dentro de un tiempo razonable, pues también es
importante señalar que si en ese tiempo el agraviado no presenta ningún reclamo implica que no
tiene interés alguno en que sus derechos y garantías le sean restituidos” (las negrillas y el
subrayado son nuestras).

Por otra parte la referida SC 0792/2007-R, concluyó que: “…el principio de inmediatez está
basado en el principio de preclusión de los derechos para accionar, lo que significa que para
poder ingresar al análisis de fondo de la problemática que se plantea en este tipo de acciones
tutelares, quien recurre de amparo constitucional debe interponer su acción dentro del plazo de
seis meses de conocido el acto o hecho ilegal o de agotados los medios o recursos que la ley le
otorga para subsanar la supuesta lesión, caso contrario, se estaría incumpliendo con el citado
principio del recurso de amparo constitucional” ( las negrillas y subrayado nos pertenecen).

La amplia jurisprudencia constitucional emanada del Tribunal Constitucional, establece que la


acción de amparo constitucional “…podrá interponerse en el plazo máximo de seis meses,
computable a partir de la comisión de la vulneración alegada o de notificada la última decisión
administrativa o judicial” (art. 129.II de la CPE); de ese modo, se pretende acentuar el propósito
de esta acción, consistente en otorgar protección inmediata y eficaz a los derechos y garantías
lesionados, dentro de un plazo razonable fijado al efecto; considerando que el agraviado no puede
disponer indefinidamente de la jurisdicción constitucional (con similar afirmación, las SSCC
0551/2010-R, 0554/2010-R, 0626/2010-R, 0782/2010-R, entre otras), (las negrillas y subrayado
son agregadas).

En síntesis, la interposición de la acción de amparo constitucional fuera del plazo de los seis meses,
previsto en el art. 129.II de la CPE, no implica una simple y llana exigencia, sino más bien
responde al tiempo prudente de tolerancia o aceptación del acto lesivo que se acusa, de lo contrario
da lugar al principio de preclusión del derecho de acudir a esta acción tutelar ante la jurisdicción
constitucional; por cuanto el ciudadano o afectado en sus derechos o garantias, por su propio
interés debe ser diligente y acudir sin ningún tipo de espera a la protección de los mismos, de no
ser así su actitud llega a ser negligente en causa propia llevándolo a una consecuencia jurídica, que
es la extemporaneidad de la presentación de la acción; lo que significa que no se puede ingresar al
análisis de fondo.

III.3. Análisis del caso concreto

En el presente caso, el accionante manifiesta que al ser una persona discapacitada goza del derecho
a la inamovilidad laboral; empero, a raíz de ser sujeto de tres llamadas de atención se le inició un
proceso sumario administrativo, donde se dispuso la destitución de su fuente laboral, por el
incumplimiento del deber de acatar las determinaciones emitidas por el superior jerárquico; por lo
que, sostiene que se han vulnerado los derechos y garantías fundamentales.

Con carácter previo, corresponde verificar si el accionante intentó la activación de la justicia


constitucional para hacer prevalecer los derechos que le fueron lesionados pues debió hacerlo en su
oportunidad; al respecto, el accionante en su memorial de interposición de la presente acción, en
cuanto a la oportunidad de su presentación refiere que: “ha sido notificado con la última decisión
administrativa el 8 de julio de 2011, la presente acción de amparo constitucional se halla dentro del
plazo de los seis meses concedido por el art. 129.II de la CPE, lo que igualmente determina su
procedencia” (sic);.empero, de la revisión de antecedentes se puede advertir que el memorial de
interposición de la presente acción se encuentra con fecha 7 de enero de 2012; sin embargo, el
cargo de recepción de Plataforma de Atención al Usuario del Tribunal Departamental de Justicia
de Chuquisaca, indica que fue presentado a horas 10:34 del 9 de enero de “2011” y el cargo

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 282


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

posterior de la Sala Civil Primera de ese Tribunal refiere que fue a horas 11:40 del 9 de enero de
2012, evidenciando que existe un error en el que incurrió la Unidad de Plataforma; es decir, en el
año mencionado; sin embargo, se concluye que el memorial coincide con el año consignado en la
recepción de Sala; por tanto se puede corroborar que el año correcto de su recepción es 2012.

En ese entendido y con todas las aclaraciones realizadas, se evidencia que el cómputo del plazo de los
seis meses en el presente caso es realizado a partir de la ultima notificación con la última decisión
administrativa -Resolución Administrativa Gubernamental 213 de 1 de julio de 2011-, toda vez que el
accionante fue notificado el 8 de julio de 2011, con intervención notarial y en su memorial señaló que
no tuvo conocimiento efectivo de la misma; empero, después presentó su memorial el 9 de enero de
2012; por tanto, se puede afirmar que en antecedentes existe prueba de la constancia objetiva de
dicho actuado y da lugar a la aplicación del principio de inmediatez, ya que el accionante a
momento de presentar la acción se encontraba a los seis meses y un día de la última notificación,
por ende ha operado la caducidad o el principio de preclusión del derecho de acudir a esta acción
tutelar; situación que en el presente caso inviabiliza por extemporáneo, el ingreso al análisis de
fondo de la acción planteada.

Por otra parte, cabe señalar que a pesar de tratarse de una persona discapacitada o con capacidades
especiales y que a través del art. 72 de la CPE, el Estado garantizará a las personas con
discapacidad los beneficios que se encuentran en la ley, es pertinente hacer notar que no existe
ningún tipo de exclusión para el cumplimiento del requisito de inmediatez en la presente acción y
al respecto el art. 14.V de la CPE, indica que: “las Leyes Bolivianas se aplican a todas las personas,
naturales o jurídicas, bolivianas o extranjeras, en el territorio boliviano”; es decir, todas las
personas tenemos el deber de cumplir las leyes bolivianas y en el presente caso no existe norma
expresa que disponga la excepción del cumplimiento de este requisito; por lo que, con todos los
fundamentos esgrimidos se puede colegir que se hace inviable la consideración de la acción de
amparo constitucional por el incumplimiento al principio de inmediatez.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber denegado la acción de amparo constitucional,


aunque con otros fundamentos, ha actuado correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art.
12.7de la LTCP, en revisión resuelve: DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración de que no
se ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-magistrada


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 283


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0041/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de Libertad
Expediente: 00055-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 13/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 31 a 36 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Edwin Daniel Hurtado Huanca en
representación sin mandato de Jorge Melgar “Quette” contra Virginia Janeth Crespo Ibáñez
y Ricardo Chumacero Tórrez, Vocales de la Sala Penal Primera; y, Nancy Bustillos de
Altuzarra y Carlos Blanco Quisbert, Jueces Técnicos del Tribunal Quinto de Sentencia,
todos del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 20 de enero de 2012, cursante de fs. 10 a 12 vta., el accionante por
su representado, expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Solicitó la cesación a la detención preventiva de su representado al Tribunal Quinto de


Sentencia, en virtud del art. 239. 1, 2 y 3 del Código de Procedimiento Penal (CPP);
fundamentando con relación al punto 1, que se encuentra delicado de salud al padecer varias
enfermedades, ser de edad avanzada (65 años) y haber sido intervenido quirúrgicamente,
situación que agravó su estado de salud; respecto al numeral 2, sostuvo que fue acusado por
varios delitos, siendo el más grave de ellos el de atentado contra la seguridad de los servicios
públicos, previsto por el art. 214 del Código Penal (CP), y cuya pena es de dos a seis años de
privación de libertad; finalmente, con relación al numeral 3, indicó que por el certificado de
conducta y permanencia extendido por el Gobernador del Recinto Penitenciario, se encuentra
detenido preventivamente tres años y tres días en el penal de San Pedro de la ciudad de La Paz,
habiendo transcurrido treinta y seis meses sin que se hubiera dictado sentencia hasta la fecha.

Refiere que el Tribunal Quinto de Sentencia, por Resolución 44/2011 de 15 de noviembre,


rechazó su solicitud señalando que los motivos de salud expuestos, no fueron considerados
como riesgos procesales, sin haber desvirtuado por ningún medio lo previsto en los arts. 234.2 y
“235”.1 y 2; y que si bien es cierto que ha transcurrido el tiempo previsto, ello no basta sino que
además deben desvirtuarse los riesgos procesales. En ese entendido, apeló la Resolución, recurso
que radicó en la Sala Penal Primera y, en audiencia, fundamentó que el Juez a quo no cumplió
con el art. 124 del CPP, al no haber valorado correctamente la prueba referente a la intervención
quirúrgica realizada el 25 de agosto de 2011; por otro lado, no se expresaron los motivos de
derecho en que basan su decisión de no aplicar el numeral 2 del art. 239 del referido Código,
conforme al entendimiento de la SC 0832/2011-R de 3 de junio, que establece que cuando se

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 284


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

verifique que la detención preventiva excede el mínimo legal del delito de mayor gravedad,
procederá la cesación, debiendo el juez o tribunal aplicar las medidas cautelares que
correspondan previstas en el art. 240 del mencionado Código; empero, la Resolución fue
confirmada, bajo el fundamento principal que no se habrían desvirtuado los riesgos procesales y
como tampoco se aportó prueba al efecto; de igual forma, la Sala indicó no ser suficiente el
transcurso del tiempo, toda vez que el peligro de obstaculización duraría todo el proceso según
la SC “225/2004” y que conforme la SC 1131/2011-R de 19 de agosto, para aplicar el art. 239
del CPP, no basta el transcurso del tiempo sino que deben desvirtuarse los riesgos procesales.

Sostiene que el Tribunal Quinto de Sentencia y la Sala Penal Primera, no aplicaron


correctamente la ley y los precedentes constitucionales obligatorios y vinculantes, referentes al
art. 239.2 del CPP y en su caso, la pena establecida para el delito que se le juzga tiene un
mínimo legal de dos años, siendo que se encuentra detenido tres años y tres días, citando al
efecto las SSCC 0832/2011-R y 1131/2011-R, que -dice- no fueron aplicadas correctamente,
toda vez que ambas se refieren al art. 239.2 del indicado Código, señalando que únicamente
debe considerarse el transcurso del tiempo, sin que tengan que tomarse en cuenta otros aspectos
ajenos a la exigencia de la norma legal; además, la referida SC 1131/2011-R, en la que se basó
la Sala Penal Primera, sólo exige que deban desvirtuarse los motivos que la fundaron en el caso
del numeral 3 del ya mencionado artículo, motivo por el que no es aplicable a la causal prevista
en el numeral 2 de dicho artículo.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante estima que su representado está indebidamente privado de libertad personal,


citando al efecto el art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes, solicita la “tutela constitucional” y se restablezcan las formalidades de


ley, “para obtener un debido proceso y estado de derecho mi libertad” (sic).
I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 25 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 24
a 30 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante ratificó y reiteró los fundamentos de su acción de libertad.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Virginia Janeth Crespo Ibáñez y Ricardo Chumacero Tórrez, Vocales de la Sala Penal Primera,
en el informe escrito cursante de fs. 16 a 18, señalan: a) De la revisión de antecedentes se
establece que no se ha brindado ningún otro elemento de juicio a su Tribunal y tampoco al
inferior, por el que se desvirtúe el riesgo de obstaculización contenido en el art. 235.2 y 3 del
CPP; b) No es suficiente el transcurso del tiempo para otorgar la cesación a la detención
preventiva, sino que además es necesario desvirtuar los riesgos procesales, toda vez que las
resoluciones dictadas en medidas cautelares, por su naturaleza y características procesales
propias, no causan estado y son modificables o revocables aún de oficio, por determinación del
art. 250 del mismo Código; c) Si bien el art. 239 del CPP, permite la cesación de la detención
preventiva, conforme la SC 0832/2011-R de 3 de junio, también el Tribunal Constitucional en la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 285


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

SC 1131/2011-R de 19 de agosto, estableció que en el caso del numeral 3 del indicado artículo,
además del transcurso del tiempo, se exige que el imputado demuestre con elementos de
convicción necesarios, que los motivos que fundaron su detención preventiva han sido
modificados o ya no existen; d) En autos, si bien se adjuntó certificado médico, de la revisión de
los antecedentes se tiene que el imputado no ha presentado elemento alguno que pueda
desvirtuar los riesgos procesales por los que fue detenido, previstos en los arts. 234.2 y 235.1 y 3
del CPP, por lo que de un análisis integral se concluye que no demostró con nuevos elementos
que los motivos han desaparecido; y, e) Vencidos los plazos previstos en los numerales 2 y 3 del
art. 239 del CPP, el juez o tribunal aplicará las medidas cautelares que correspondan, siempre
que la demora no sea atribuible al imputado. De igual forma, en audiencia añadieron que el
imputado no demostró con prueba, ya sea ante el Tribunal Quinto de Sentencia o al tribunal de
apelación, que los actos dilatorios en la demora del proceso no hubieran sido atribuibles a él, de
acuerdo a lo previsto en el ya mencionado art. 239.

Nancy Bustillos de Altuzarra y Carlos Blanco, Jueces Técnicos del Tribunal Quinto de
Sentencia, manifestaron: i) Por Resolución 44/2011 rechazaron la solicitud de cesación de
detención formulada por el imputado, porque de acuerdo a la línea jurisprudencial del Tribunal
Constitucional, para disponer la cesación o modificación de la detención preventiva, deben
considerarse los fundamentos que el juez cautelar tomó en cuenta para disponer la detención
preventiva del imputado, que en el caso fueron los riesgos procesales previstos en el art. 234
núm. 2) del CPP y en los numerales 1 y 2 del art. 235 del cuerpo mismo legal, que no fueron
desvirtuados por el accionante; ii) Es evidente que Jorge Melgar “Quette” se encuentra delicado
de salud, pero esta situación no ha sido contemplada por la autoridad que ordenó su detención;
sin embargo, fue atendido de manera oportuna; iii) Para el rechazo de la solicitud de cesación de
detención preventiva, el Tribunal consideró de manera integral los tres numerales del art. 239
del CPP, ya que el imputado solicitó su cesación invocando todos ellos, sin embargo, no
desvirtuó los numerales 1 y 3, por lo que se decidió su rechazo; y, iv) En la presente causa no se
ha agotado las vías recursivas, toda vez que las medidas cautelares no causan estado, son
revisables y modificables, pudiendo el accionante volver a solicitar la cesación de la detención
preventiva.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituida en Tribunal
de garantías, pronunció la Resolución 13/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 31 a 36 vta.,
denegando la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: 1) Se invoca procesamiento
indebido o privación indebida de libertad, respecto a lo primero, la SC619/2005-R de 7 de junio,
exige que existan actos lesivos y absoluto estado de indefensión, aspectos que el accionante no
acreditó bajo ningún elemento, pues cuenta con asistencia jurídica y tiene los medios y recursos
legales a su alcance; 2) La SC 1130/2011-R de 19 de agosto, estableció que existe detención
ilegal o indebida cuando no se cumplen las formalidades legales; en el caso, la detención
preventiva del accionante se produjo en base a los arts. 233, 234 y 235 del CPP, dentro de una
acción penal que cuenta con imputación formal y al presente con acusación; 3) El accionante
solicitó cesación a la detención preventiva con el argumento de que existen nuevos elementos
que tornaban conveniente sea sustituida por otras medidas, basado en su estado de salud, de
conformidad al numeral. 1 del art. 239 del CPP, extremo que, sin embargo, no fue considerado
como riesgo procesal en la Resolución 392/2008 de 15 de diciembre, que ordenó su detención,
en virtud de los riesgos procesales de los arts. 234. 2 y 235. 1 y 2 del CPP, razón por la cual los
tribunal de instancia actuaron correctamente al negar la cesación, ya que el accionante no
acreditó nuevos elementos que tornen conveniente la cesación; 4) Con relación a la procedencia
de los numerales 2 y 3 del art. 239 del CPP, invocados por el accionante, no es suficiente el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 286


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cómputo del tiempo transcurrido, sino que la disposición debe ser interpretada y aplicada en
armonía con otras normas, conforme el principio de concordancia práctica, por lo que se
evidencia que el accionante no cumplió la última parte del artículo citado, que dispone que se
aplicarán medidas sustitutivas siempre que la demora no sea atribuible a los actos dilatorios del
imputado; y, 5) Sobre la incorrecta aplicación de precedentes constitucionales, la SC 1131/2011-
R de 19 de agosto, dispone que corresponde otorgar cesación de la detención preventiva siempre
que se cumplan las formalidades procesales exigidas por las autoridades judiciales a fin de
garantizar la presencia del procesado, lo cual no aconteció en el presente caso, siendo obligación
del imputado demostrar que los motivos que fundaron su detención han sido modificados o ya
no existen.

I.3. Trámite en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Al no haber obtenido consenso en sala el proyecto de la Magistrada Relatora Dra. Mirtha


Camacho Quiroga, de conformidad al art. 30.I.6 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional, se procedió a convocar al Presidente del Tribunal constitucional Plurinacional a
fin de dirimir con su voto el caso en análisis.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y análisis de los antecedentes que cursan en el expediente, se establece lo


siguiente:

II.1. No cursa en obrados la solicitud de cesación a la detención preventiva, así como tampoco la
Resolución del Tribunal de Sentencia que resolvió esa solicitud, ni el Auto de Vista que en
apelación aprobó la determinación asumida por el Tribunal de primera instancia.

II.2. De acuerdo al certificado de permanencia y conducta emitido el 18 de octubre de 2011, el


representado del accionante ingresó al penal de “San Pedro” el 15 de octubre de 2008, con
mandamiento de detención preventiva, dentro del proceso seguido por el Ministerio Público por
los delitos de terrorismo, alzamientos armados contra la seguridad y soberanía del Estado,
sedición y atentados contra la seguridad, siendo su permanencia en el Recinto Penitenciario de
tres años y tres días (fs. 1).

II.3. Del informe presentado por los Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz, ahora demandados, se tiene que dichas autoridades
fundamentan su actuación en los siguientes hechos: a) De la Resolución 44/2011, se advirtió en
forma clara que el Tribunal a quo consideró que respecto a la salud del imputado, éste gozaba de
toda la atención necesaria; b) No existía ninguna prueba que anule el riesgo de obstaculización
contenido en el art. 235.2 y 3 del CPP, motivo por el cual se podría hacer viable y en cierta
medida desvirtuar esa figura procesal; c) El transcurso del tiempo no es suficiente para hacer
desaparecer los riesgos procesales que motivaron la detención preventiva, sin que el imputado
hubiese demeritado los presupuestos por los que se le impuso la medida, concernientes a la
probabilidad de la autoría, las facilidades que tenía para abandonar el país, la posibilidad de que
pueda influir negativamente sobre los partícipes, así como tampoco el procesado presento el
certificado médico que demuestre su delicado estado de salud invocado; y, d) Finalmente los
demandados hacen hincapié en que no se demostró con nuevos elementos la modificación de los
motivos que fundaron la decisión del rechazo a la cesación, para poder efectuar una valoración
integral, así como tampoco que la demora no era atribuible al imputado (fs. 16 a 18); añadiendo
además en audiencia sobre este último punto, que no era evidente que no se hubiesen
pronunciado con referencia al numeral 2 del art. 239 del CPP, pues de la Resolución se

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 287


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

evidenciaba claramente que no sólo se tiene que considerar el transcurso del tiempo, sino que se
debe analizar de forma íntegra el art. 239 del citado Código, lo que conlleva a que el imputado
debió demostrar con prueba, que los actos dilatorios en la demora del proceso no eran atribuibles
a su persona.

De igual forma, del informe presentado en audiencia por los Jueces demandados, se tiene que
éstos basaron el rechazo de la cesación a la detención preventiva en los siguientes puntos: 1)
Correspondía a la defensa hacer conocer los nuevos elementos que desvirtúen o demuestren que
el imputado ya no tenía facilidades para fugarse; empero como nuevo elemento sólo se presentó
el estado de salud del procesado, constituyendo ello una situación que no fue contemplada en la
Resolución que determinó la medida cautelar; 2) El procesado fue atendido debidamente de los
problemas de salud que presentaba, permitiéndole todas las salidas que la ley le otorgaba para
ese cometido; y, 3) La defensa alega que no se consideró el art. 239.2, pero no toma en cuenta
que cuando se analiza la procedencia de una medida cautelar, el juzgador debe efectuar una
valoración integral de la prueba, y en base a ello se concluyó que no se desvirtuó el peligro de
fuga ni los otros riesgos procesales, por esa razón quedaba sólo el numeral 2, lo que conllevaba
que al existir otros dos puntos negativos, frente a uno positivo correspondía el rechazo de la
cesación, fundamentación que se hizo conocer al procesado indicándole incluso que nunca
demostró tener domicilio en La Paz.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración del derecho a la libertad personal de su representado, puesto


que ni el Tribunal Quinto de Sentencia, ni la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz, aplicaron correctamente la ley y los precedentes constitucionales, con
relación a la previsión contenida en el art. 239.2 del CPP, dado que no consideraron que se había
excedido el mínimo legal del delito más grave por el que su defendido fue acusado,
encontrándose detenido por más de tres años al momento de interponer la acción de libertad. Por
lo expuesto, corresponde analizar en revisión, si en el caso concreto se debe otorgar o denegar la
tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y alcances de la acción de libertad

La acción de libertad, está instituida por la Norma Fundamental como una acción de defensa que
tiene por objeto la protección de los derechos a la libertad física, libertad de locomoción y a la
vida, de toda persona que considere que su vida esté en peligro, que es ilegalmente perseguida o
que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, conforme lo establece el art. 125
de la CPE.

De acuerdo a ello, el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), al


determinar el objeto de esta acción constitucional extraordinaria, establece que es de tramitación
sumarísima con el fin de garantizar la protección de los derechos a la vida, a la libertad física y a
la locomoción para su restablecimiento inmediato y efectivo, en los casos que se evidencie su
restricción o supresión.

En el marco de los preceptos normativos citados, corresponde ingresar al análisis de la


problemática planteada por la parte accionante, a fin de determinar si la misma procede en el
ámbito de la naturaleza y alcance de esta acción tutelar y la materialización de su finalidad.

III.2. La cesación de la detención preventiva por el transcurso del tiempo y sus elementos
concurrentes

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 288


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La norma prevista por el art. 239 del CPP, modificado por el art. 1 de la Ley 007 de 18 de mayo
de 2010, establece los presupuestos de cese de la detención preventiva, referidos a:

“1. Cuando nuevos elementos de juicio demuestren que no concurren los motivos que la
fundaron o tornen conveniente que sea sustituida por otra medida;

2. Cuando su duración exceda el mínimo legal de la pena establecida para el delito más grave
que se juzga; y

3. Cuando su duración exceda de dieciocho (18) meses sin que se haya dictado acusación o de
treinta y seis (36) meses sin que se hubiera dictado sentencia.

Vencidos los plazos previstos en los numerales 2) y 3), el juez o tribunal aplicará las medidas
cautelares que correspondan previstas en el Artículo 240 de este Código, siempre que la demora
no sea atribuible a los actos dilatorios del imputado”.

Al respecto, es evidente que el objeto de la citada norma procesal responde a fijar un lapso para
la detención preventiva, en términos de garantizar que el acusado sea juzgado dentro de un plazo
razonable y no mantener la restricción de su libertad en forma indefinida paralela a las
incidencias que dilaten el proceso en sí; sin embargo, no es menos cierto que ese límite temporal
fijado por la norma, tiene a su vez un mecanismo que posibilita a que el juzgador exija se
desvirtúe la existencia de riesgos procesales, traducidos en el cumplimiento de determinadas
formalidades, con el objeto de garantizar a su vez la presencia del imputado en el proceso,
materializando de esa forma un equilibrio procesal entre el ejercicio del ius puniendi del Estado,
reflejado en la eficacia del proceso penal y las garantías procesales que asisten a las partes
dentro de una acción penal.

El razonamiento citado, que como se estableció responde a la ponderación de la eficacia del


proceso frente a los derechos y garantías procesales del acusado, Así También concuerda con los
entendimientos asumidos por la jurisprudencia constitucional, que fueron sintetizados en la SC
0805/2010-R de 2 de agosto al señalar: “…el Código de Procedimiento Penal en resguardo del
derecho del imputado a ser juzgado dentro de un plazo razonable, estableció un límite temporal
a la detención preventiva, pues el fundamento de la duración máxima de esa medida halla su
explicación en el equilibrio que debe existir entre la necesidad de eficacia del proceso penal y el
respeto al principio de inocencia del imputado. No obstante lo mencionado corresponde señalar
que las autoridades jurisdiccionales tienen la plena potestad de exigir el cumplimiento de
ciertas formalidades procesales a fin de garantizar la presencia del procesado o condenado en
el proceso; y si bien es cierto que la SC 0947/2001-R exigía únicamente el transcurso del
tiempo para la viabilización de la cesación de detención preventiva por la causal comprendida
en el inc. 3) del art. 239 del CPP, no es menos evidente que los alcances de dicho fallo fueron
modulados de manera general por la SC 0034/2005-R de 10 de enero, que establece que es el
imputado quien debe demostrar con los elementos de convicción necesarios, que los motivos
que fundaron su detención preventiva, han sido modificados o ya no existen, aspectos que no
sólo serán valorados por el juez cautelar sino por el propio tribunal de alzada que conozca en
apelación la Resolución que conceda o rechace la cesación de la detención preventiva; cual
aconteció en autos. Así se explicó a través del Auto Constitucional 0005/2006-ECA de 20 de
enero”.

A objeto de precisar los razonamientos precedentes, conviene referirse al objeto y alcance de la


detención preventiva y su cesación o modificación por otro tipo de medidas cautelares. Así,
tiene por objeto asegurar la presencia del imputado en el proceso, constituyéndose en una

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 289


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

medida provisional, revisable y modificable aún de oficio, carácter establecido por el art. 250 del
CPP, con el fin de evitar que la detención se convierta en una pena anticipada, siendo que el
proceso penal aún está siendo sustanciado y no existe sentencia ejecutoriada.

De ello se infiere la necesidad de existencia de equilibrio entre la finalidad de la medida cautelar


de detención preventiva y los derechos del imputado; en ese orden, el sistema penal boliviano
configura la detención preventiva bajo criterios procesalistas, que van más allá de los criterios
sustantivos de asimilación de la pena y asimilación de la medida de seguridad sostenidos por
Marcelo Cipriani en el desarrollo de su teoría sobre la custodia preventiva.

En efecto, del análisis de nuestras leyes adjetivas, se puede establecer que superando los citados
criterios, el procedimiento penal ha previsto la medida cautelar en estudio bajo el marco de los
criterios procesalistas desarrollados por Cafferata Nores, referidos a: 1) La tutela del
descubrimiento de la verdad, por cuanto “La posibilidad de que el imputado utilice su libertad
para obstaculizar la investigación, es causal de denegatoria de la eximición de prisión o de la
excarcelación en las leyes procesales, por lo cual, a contrario sensu, dicha posibilidad se
constituye en fundamento de encarcelamiento preventivo”; 2) La tutela de la realización del
proceso, dado que “partiendo de la base de que las leyes procesales reglamentarias del juicio
previo proscriben que éste se realice si el encartado no se halla presente, y muchas de ellas
contienen disposiciones que impiden el avance del proceso frente a la ausencia de aquél
(prohibición del juicio en rebeldía), se advierte claramente que la presencia del imputado
durante el juicio resulta una necesidad ineludible”; y, 3) Tutela del cumplimiento de la pena
futura, traducida en arrogar “al encarcelamiento preventivo la finalidad de asegurar el
cumplimiento de la posible condena de presión o reclusión, impidiendo que el imputado eluda,
mediante su fuga, la efectiva ejecución de la pena” (Cafferata Nores. “La Excarcelación”.
Ediciones Depalma. Buenos Aires, Argentina).

Ahora bien, lo criterios procesalistas desarrollados por la doctrina, deben ser siempre
ponderados con los derechos y garantías procesales que asisten al procesado a objeto de evitar -
como ya se dijo- que la detención preventiva se convierta en una pena anticipada. Precisamente
en el marco de esa ponderación, la normativa procesal ha establecido los tres presupuestos en los
que procede la cesación de la detención preventiva, pero al mismo tiempo, en un equilibrio con
los fines del proceso y su efectivización, es que se prevé también el cumplimiento de ciertas
formalidades, cuales son la no persistencia de los riesgos procesales que motivaron la detención
preventiva, y que la demora no sea atribuible a los actos dilatorios del imputado, ello implica
que el juzgador, debe necesariamente efectuar una valoración integral de los presupuestos,
circunstancias y actuaciones suscitadas en el caso concreto y en base a ello determinar si
procede el cese de la detención preventiva y en su caso la aplicación de alguna medida
sustitutiva.

De esa forma, se procura evitar que la detención preventiva se convierta en una pena anticipada,
pero al mismo tiempo se dota a las autoridades jurisdiccionales de los mecanismos que permitan
garantizar la presencia del imputado o condenado en el proceso, evaluando si procede la
aplicación de medidas sustitutivas en el marco de la valoración integral de los presupuestos que
motivaron la detención y en la actuación del imputado o condenado en el proceso y que la
misma no hubiese sido evidentemente dilatoria, tendientes siempre estos dos últimos elementos
a efectivizar el ejercicio del ius puniendi del Estado y también a revalorizar a la víctima,
procurando un equilibrio entre ésta y el procesado tanto del acceso a la justicia cuanto de la
tutela judicial efectiva.

III.3. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 290


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Efectuadas esas precisiones, corresponde ingresar al análisis de la problemática planteada por el


accionante, en sentido de que su representado se encuentra indebidamente privado de libertad,
por cuanto dentro del proceso penal seguido en su contra, se solicitó la cesación de la detención
preventiva, misma que fue rechazada por los Jueces miembros del Tribunal Quinto de Sentencia
y en apelación por la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,
quienes incumplieron la previsión contenida en el art. 239.2 del CPP, ya que no consideraron
que en el caso de su defendido se excedió el mínimo legal del delito más grave por el que fue
acusado que es de dos años, encontrándose detenido por más de tres años, lo que significa que
no podía tomarse en cuenta otros aspectos ajenos a la exigencia de la norma legal, sino
únicamente considerarse el transcurso del tiempo.

De la demanda de acción de libertad interpuesta por el accionante, así como de los informes
orales y escritos presentados por las autoridades demandadas, se tiene que ante la solicitud de
cesación a la detención preventiva del representado del accionante, los Jueces del Tribunal
Quinto de Sentencia, rechazaron la misma, básicamente porque la defensa no hizo conocer los
nuevos elementos que demostraban que el imputado ya no tenía facilidades para fugarse, al
contrario sólo se presentó un documento sobre el estado de salud del procesado, constituyendo
ello una situación que no fue contemplada en la Resolución que determinó la medida cautelar,
además de ello cuando se analiza la procedencia de una medida cautelar, el juzgador debe
efectuar una valoración integral de la prueba, y en base a ello se concluyó que no se desvirtuó el
peligro de fuga ni los otros riesgos procesales, correspondía en consecuencia el rechazo de la
cesación, fundamentación que se hizo conocer al procesado indicándole incluso que nunca
demostró tener domicilio en La Paz.

Por su parte, los Vocales ahora demandados habrían confirmado la Resolución del Tribunal a
quo, con los siguientes fundamentos: Respecto a la salud del imputado, de la Resolución
44/2011, se advirtió en forma clara que el Tribunal a quo evidenció que el procesado gozaba de
toda la atención necesaria; el transcurso del tiempo no era suficiente para desvirtuar los riesgos
procesales que motivaron la detención preventiva, sin que el imputado hubiese desvirtuado los
presupuestos por los que se le impuso la medida, concernientes a la probabilidad de la autoría,
las facilidades que tenía para abandonar el país, la posibilidad de que pueda influir
negativamente sobre los partícipes; además de que no se demostró con nuevos elementos la
modificación de los motivos que fundaron la decisión del rechazo a la cesación para poder
efectuar una valoración integral, tampoco se probó que la demora no era atribuible a los actos
dilatorios del imputado.

De la relación efectuada por el accionante y las autoridades judiciales demandadas, se evidencia


que en el presente caso los demandados actuaron en el marco de las facultades previstas por el
art. 239 del CPP, por cuanto rechazaron la solicitud de cesación de la detención preventiva del
representado del accionante, efectuando para ello una valoración integral de los presupuestos
que determinaron y motivaron la imposición de la citada medida cautelar, señalando en forma
expresa al imputado cuáles eran las razones para no proceder a su pedido de cesación indicando
en cada riesgo procesal el motivo por el cual el mismo se mantenía subsistente, circunstancias
que además son confirmadas por la misma parte accionante, que no niega ello y al contrario
centra su demanda de libertad aduciendo que en su caso se cumplió con el supuesto previsto por
el art. 239.2 del mencionado Código y que por ende, no requería de mayores formalidades para
que las autoridades demandadas dispongan su libertad.

Al respecto, conforme se ha establecido en el fundamento jurídico anterior, el transcurso del


tiempo fijado en los numerales 2 y 3 del art. 239 del CPP, no determina por sí solo el cese de la
detención preventiva y en su caso, la imposición de medidas sustitutivas o la libertad, y tampoco

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 291


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

exime al juzgador de efectuar una valoración integral de los presupuestos que motivaron la
detención y en base a ello determinar si en efecto procede el cese de dicha medida, sumándose a
ello, el hecho de que la norma en forma expresa determina que vencidos los plazos previstos en
los numerales 2 y 3 del art. 239 citado Código, el juez o tribunal aplicará las medidas cautelares
que correspondan, siempre que la demora no sea atribuible a los actos dilatorios del imputado.

Ahora bien, es importante precisar que por el alcance y fin que tiene, la carga de la prueba en
medidas cautelares le compete al imputado, pues es a éste a quien le corresponde demostrar
tanto el cese de los presupuestos que motivaron la detención, así como que los actos dilatorios
no le son atribuibles, dado que en base al principio de libertad probatoria es quien debe hacer
uso de todos los medios legales para probar su interés jurídico con la finalidad del cese de la su
detención, al no persistir los elementos que la motivaron y tampoco haber provocado dilación
injustificada (con similar razonamiento, la SC 1174/2011-R de 29 de agosto).

En consecuencia, por las razones expuestas, no corresponde otorgar la tutela en el presente caso,
al no advertirse acto ilegal ni omisión indebida por parte de las autoridades demandadas, quienes
al contrario, enmarcaron sus actuaciones a cumplimiento de la finalidad del art. 239 del CPP,
explicando además en forma motivada y fundamentada las razones por las que no procedía el
cese de la detención preventiva.

III.4. Consideraciones sobre las SSCC 0832/2011-R y 1131/2011-R

Resuelta como se encuentra la problemática planteada, es preciso efectuar una aclaración


respecto a las apreciaciones efectuadas por el accionante en su demanda, al señalar que del
contenido de la SC 0832/2011-R de 3 de junio, se infería que referente al art. 239.2 del CPP,
sólo se requería el transcurso del tiempo, indicando por otro lado que la Vocal de la Sala Penal
Primera contaría con la SC 1131/2011-R de 19 de agosto, la cual establecería respecto al
contenido del mismo artículo, que no basta el transcurso del tiempo sino que debería
desvirtuarse antes los riesgos procesales.

Al respecto, y -se reitera- sólo a manera de aclaración, se hace notar al accionante que la
interpretación que efectúa sobre la SC 0832/2011-R, es totalmente contraria a los criterios
asumidos en dicho fallo constitucional, en el que de manera expresa se concede la tutela a la
víctima, con el fundamento que los demandados fundaron su Resolución para otorgar la
cesación de la detención preventiva, únicamente en el transcurso del tiempo y no en elementos
de convicción que determinen su procedencia y que por ende vulneraron la garantía del debido
proceso del accionante que era el querellante dentro del proceso penal, aplicando para dicho
razonamiento los entendimientos asumidos por las Sentencias Constitucionales invocadas en el
presente caso, es decir, que al contrario de lo sostenido por el accionante, la SC 0832/2011-R es
totalmente coherente y concordante con los razonamientos expuestos en los Fundamentos
Jurídicos III.2 y III.3.

Respecto a la SC 1131/2011-R, aplicada en su caso por el Tribunal de apelación, tampoco se


trata de “otra” Sentencia Constitucional que asuma un criterio distinto, sino que al contrario
ratifica todos los razonamientos y entendimientos asumidos por las SSCC 0034/2005-R,
0805/2010-R y 0832/2011-R; en ese orden, se evidencia que los uniformes criterios asumidos
por la jurisprudencia constitucional, fueron aplicados en forma debida por las autoridades ahora
demandadas.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 292


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo precedentemente señalado, el Tribunal de garantías al haber denegado la acción de


libertad, ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y aplicado
debidamente los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Se hace constar que la Magistrada Dra. Mirtha Camacho Quiroga, primera relatora, es de voto
disidente.

Fdo. Dr. Ruddy José Flores Monterrey.- Presidente.


Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

VOTO DISIDENTE
Sucre, 27 de marzo de 2012

Sentencia: 0041/2012 de 26 de marzo


Expediente: 00055-2012-01-AL
Materia: Acción de Libertad
Partes: Edwin Daniel Hurtado Huanca en representación sin
mandato de Jorge Melgar “Quette” contra Virginia
Janeth Crespo Ibáñez y Ricardo Chumacero Torre,
Vocales de la Sala Penal Primera; y Nancy Bustillos de
Altuzarra y Carlos Blanco Quisbert, Jueces Técnicos
del Tribunal Quinto de Sentencia, todos del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz.
Departamento: La Paz
Mag. Disidente: Dra. Mirtha Camacho Quiroga

La suscrita Magistrada, presenta su voto disidente en el fondo, con relación a la SC 0055/2012-


R de 26 de marzo, conforme a los siguientes fundamentos:

1. Naturaleza jurídica, finalidad y principios rectores de las medidas cautelares personales


y de la detención preventiva en particular

Las medidas cautelares personales, previstas en el Libro Quinto, Título Segundo, de la Ley
1970, son medidas de coerción procesal destinadas a asegurar la acción de la justicia y el
cumplimiento de la ley penal, al respecto la doctrina sostiene que:“La coerción procesal es
aplicación de la fuerza pública que coarta libertades reconocidas por el orden jurídico”, cuya
finalidad, sin embargo, no reside en la reacción del Derecho frente a la infracción de una norma
de deber, sino en el “resguardo de los fines que persigue el mismo procedimiento, averiguar la
verdad y actuar la ley sustantiva (…)”; Por ello, es verdad que, en el Derecho procesal penal, el
fundamento real de una medida de coerción sólo puede residir en el “peligro de fuga del
imputado” o en el “peligro de que se obstaculice la averiguación de la verdad (…)” Toda
medida de coerción, según ya se ha afirmado, representa una intervención del Estado -la más
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 293
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

rigurosa- en el ámbito de la libertad jurídica del hombre, fundamentalmente las que son
utilizadas durante el procedimiento, pues ellas son aplicables a un individuo a quien, por
imposición jurídica, se debe considerar inocente. (Maier, Julio J.B. op. cit., págs. 516-519).

Siguiendo este razonamiento, tenemos que tomar en cuenta que la detención preventiva es una
medida cautelar de carácter personal, que no tiene por finalidad el aislar a un individuo
peligroso, sino el de asegurar al imputado para el proceso, medida que debe ser aplicada de
manera excepcional, debido a que surge de la combinación entre el derecho general a la libertad
de locomoción, del que goza todo habitante del país, y la prohibición de aplicar una pena
anticipada que cercene ese derecho antes de que, con fundamento en un juicio previo, se dicte en
una sentencia de condena firme que imponga esa pena. Como ya se ha dicho, el trato de inocente
que debe recibir el imputado durante su persecución penal impide adelantarle una pena; por
consiguiente rige como principio, durante el transcurso del procedimiento, el derecho a la
libertad de locomoción, amparado por la misma Constitución.

En el caso particular de la detención preventiva, que es la medida cautelar personal más gravosa
reconocida en el ordenamiento jurídico vigente, ésta se rige por los siguientes principios
jurídicos: 1) Principio de Judicialidad, que dispone que la detención debe ser autorizada por
decisión judicial de la autoridad competente que fundamente sus presupuestos; 2) Principio de
Excepcionalidad, parte del principio de la libertad del imputado y por tanto, su encierro debe
ser autorizado únicamente en ocasiones excepcionales, cuando, fundada la probabilidad de estar
frente al autor o partícipe de un hecho punible, el peligro de fuga o de entorpecimiento de la
averiguación de la verdad, se verifique con un razonable grado de probabilidad; 3) Principio de
Proporcionalidad, aún en los casos donde se verifique la probabilidad de estar frente al autor o
partícipe de un hecho punible y la necesidad de cautela (peligro de fuga u obstaculización), la
detención preventiva no puede superar el monto de la pena del caso concreto, porque con ello el
proceso perdería todo sentido, ya que la eventual sanción habría sido resuelta de facto por
anticipado, razón por la que la detención debe cesar cuando ésta se torne desproporcional con
relación a la pena amenazada; 4) Principio de Subsidiaridad, se debe acudir a otros medios
menos gravosos que la privación de la libertad cuando éstos permitan resguardar eficientemente
los fines del procedimiento. Todos estos elementos tienen basamento constitucional, conforme
lo señalado en el fundamento jurídico III.1. de la presente Sentencia Constitucional y se
encuentran plasmados expresamente en los arts. 6, 7, 221, 222, 233, 234, 235, 237, 238, 239 y
240 de la Ley 1970.

El enfoque central de la problemática, no oscila ciertamente en la aparente dicotomía entre la


eficacia del proceso penal y los derechos y garantías individuales del imputado, sino entre
reconocer la vigencia de los límites constitucionales al poder punitivo estatal, y por ende, a la
detención preventiva, límites impuestos por la comunidad al Estado a través de la Constitución;
o bien admitir la conculcación de derechos y garantías constitucionales por razones coyunturales
vinculadas al fenómeno criminal (emergencia y alarma social), ante la ineficacia de políticas
públicas en la prevención y represión del delito, pretendiendo solucionar un fenómeno social y
económico altamente complejo vía reforma normativa al procedimiento penal y normas conexas,
que terminan haciendo inviable y contradictorio el propio sistema legal, desconociendo el diseño
constitucional del proceso penal, cuya finalidad se limita a la averiguación de la verdad, y
eventualmente la probable imposición de una pena y la reparación del daño civil.

2. El derecho a una justicia oportuna, pronta y sin dilaciones y la limitación temporal de la


detención preventiva

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 294


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Los principios constitucionales, así como los derechos fundamentales establecidos en la


Constitución, nos llevan a la conclusión de que la limitación temporal de la libertad física
provocada por la aplicación de la detención preventiva se justifica en el principio de
proporcionalidad, dado que toda persona sometida a proceso penal tiene derecho a que el mismo
concluya dentro de un plazo razonable; con mayor razón aquella que se encuentra privada de
libertad, pues le asiste el derecho a que el proceso concluya lo antes posible, y si el Estado es
moroso o negligente en el desarrollo del mismo, la detención preventiva pierde legitimidad y
razonabilidad. El derecho a obtener una decisión judicial firme en un plazo razonable está
reconocido en el art. 115.II de la CPE, que garantiza el derecho a una justicia pronta, oportuna y
sin dilaciones. Por su parte, el art. 14.III de la carta magna refiere que el Estado garantiza a todas
las personas y colectividades, sin discriminación alguna, el libre y eficaz ejercicio de los
derechos establecidos en la Constitución, las leyes y los tratados internacionales de derechos
humanos.

Debe remarcarse que el derecho al plazo razonable o una justicia pronta, oportuna y sin
dilaciones, no es privativo del imputado, sino que cobra mayor relevancia para la víctima,
quien también tiene interés en la conclusión del proceso, mediante una decisión judicial
firme que defina la situación jurídica del procesado, pues de no ser así, se la victimiza por
doble partida; por una parte como resultado del hecho delictivo, y por otra, como víctima
del Estado al no otorgarle una tutela judicial efectiva.

El plazo razonable forma parte del bloque de constitucionalidad, toda vez que se halla previsto
expresamente en el art. 8.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, y en el art.
14.3.c del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; asimismo el derecho a ser
juzgado sin dilaciones, abarca tanto la duración máxima del proceso (art. 133 CPP), límite
temporal al proceso penal, como a la duración máxima de la detención preventiva, prevista en el
art. 239 del CPP. Al respecto, debe traerse a colación nuevamente, la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, que en su art. 7.5 manifiesta: “Toda persona detenida o retenida debe
ser llevada, sin demora, ante un juez u otro funcionario autorizado por la ley para ejercer
funciones judiciales y tendrá derecho a ser juzgada en un plazo razonable o a ser puesta en
libertad, sin perjuicio de que continúe el proceso. Su libertad podrá estar condicionada a
garantías que aseguren su comparecencia en juicio.” (las negrillas son añadidas). Por su
parte, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos en el art. 9.3 indica que: “La
prisión preventiva de las personas que hayan de ser juzgadas no debe ser la regla general,
pero su libertad podrá estar subordinada a garantías que aseguren la comparecencia del acusado
en el acto del juicio, o en cualquier momento de las diligencias procesales y, en su caso, para la
ejecución del fallo.” (las negrillas son añadidas).

Siguiendo este razonamiento, tenemos el art. 239 del CPP, modificado por la Ley 007 de 18
de mayo de 2010, regula tres causales distintas e independientes, que dan lugar a la
cesación de la detención preventiva; la primera no guarda relación con la limitación
temporal de la detención preventiva, mientras que las dos últimas hallan su fundamento en
aquella. El numeral 1) del art. 239 del CPP, refiere que la detención preventiva cesará
cuando nuevos elementos de juicio demuestren que no concurren los motivos que la
fundaron o tornen conveniente que sea sustituida por otra medida; la primera modalidad de
éste numeral se basa en el principio de excepcionalidad, pues parte de un supuesto evidente,
dado que si los motivos que fundaron la detención han desaparecido, es lógico que la autoridad
jurisdiccional resuelva su cesación, quien de acuerdo a las reglas de la sana crítica, advierte que
los riesgos procesales que la fundaron han desaparecido o que la probabilidad de autoría o
participación en el hecho punible ha quedado descartada. La segunda modalidad, es decir, que
los nuevos elementos de juicio tornen conveniente que sea sustituida por otra medida,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 295


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

supone que a pesar de seguir vigentes los presupuestos que fundaron la detención, se
evidencia que existen en el caso concreto nuevos elementos de juicio que por aplicación del
principio de subsidiaridad, tornan en excesiva la detención preventiva, motivo por el que
se hace necesario sustituirla por otra(s) medida(s) que cumpla(n) la misma finalidad, sin
recurrir a una medida tan extrema como la detención preventiva.
3. La limitación temporal prevista en los numerales 2) y 3) del art. 239 de la Ley 1970

Conforme se advierte de la lectura del numeral 2) del art. 239 del CPP, modificado por la Ley
007 de 18 de mayo de 2010, la detención preventiva cesará cuando su duración exceda el
mínimo legal de la pena establecida para el delito más grave que se juzga, causal que halla su
fundamento constitucional en el derecho a ser juzgado en un plazo razonable, pues si el
imputado es detenido preventivamente a título de garantizar un procedimiento penal eficaz, y su
privación de libertad se llega a prolongar más allá del mínimo de la pena que le acarrearía una
condena por el delito que se le atribuye, el juicio y la sentencia pierden sentido, pasando a un
segundo plano, ya que la detención preventiva al ser un medio accesorio para garantizar el
proceso, adquiere preeminencia, convirtiéndose en un fin en sí mismo, situación que violenta el
debido proceso y el derecho a un juicio previo. En consecuencia, se evita que este instrumento
de coerción procesal sea tergiversado y se convierta en regla, donde primero se detiene y luego
se investiga, dejando en una situación jurídica de incertidumbre tanto a la víctima como al
imputado por un periodo de tiempo ilimitado, aspecto que también vulnera el principio de
seguridad jurídica, toda vez que es un contrasentido que, por una infracción penal hipotética, una
persona sufra un encierro que pueda superar la sanción que eventualmente le corresponderá.

Por ello, y como consecuencia lógica de la presunción de inocencia, la detención preventiva


no puede exceder en el tiempo el mínimo legal de la pena del delito más grave que
eventualmente se le aplicaría si fuese declarado culpable. He aquí que se afirme la
necesidad que la detención preventiva sea proporcional a la pena que se espera, en el
sentido de que no la pueda superar en gravedad, por tanto no es exigible ningún otro
requisito para su procedencia, como por ejemplo, el desvirtuar mediante nuevos elementos
de juicio que no concurren los motivos que fundaron la detención preventiva, requisito que
solo es exigible para la causal prevista en el numeral 1) del art. 239 del CPP; por lo que
respecto a la causal contenida en el numeral 2), el criterio rector está definido por el
principio de proporcionalidad, que limita la detención preventiva , y si en el caso concreto
se advirtiere que persiste la necesidad de cautela, la autoridad jurisdiccional deberá
aplicar las medidas sustitutivas correspondientes de acuerdo al último párrafo del artículo
citado. Una exigencia contraria es irracional y carece de sentido, puesto que si el criterio
rector es desacreditar los motivos que fundaron la detención, el legislador habría
establecido como única causal de cesación el numeral 1) del art. 239 del CPP, dejando de
lado cualquier límite temporal a la detención preventiva.

Con relación al numeral 3) del art. 239 del CPP, modificado por la Ley 007 de 18 de mayo de
2010, se establece que la detención preventiva cesará cuando su duración exceda de dieciocho
meses sin que se haya dictado acusación o de treinta y seis meses sin que se hubiese dictado
sentencia; ésta constituye al igual que las anteriores, una causal independiente, que no obstante
comparte con la causal prevista en el numeral 2), el fundamento constitucional de limitación
temporal a la detención preventiva, basado en el principio de proporcionalidad; se trata en
definitiva de un límite absoluto relacionado con la duración del procedimiento penal, y no así
con la pena previsible en el caso en concreto. El hecho de que el procedimiento se pueda
prolongar en el tiempo indefinidamente, por dificultades propias de la administración de justicia
o de la organización que un Estado dedica a esa tarea, mientras el imputado permanece privado
de su libertad, a mero título de asegurar la eficacia del proceso penal, obliga a limitar la duración

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 296


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de la detención preventiva en un máximo tolerable en un Estado Social de Derecho; con mayor


razón si el proceso penal tiene a su vez límites temporales establecidos en el art. 133 del CPP.

En ese entendido, la excepcionalidad y proporcionalidad de la detención preventiva, surge


de la necesidad de limitar el poder penal del Estado, en términos de razonabilidad y
eficacia. Un reconocimiento tácito o expreso de una duración ilimitada del proceso penal y de la
detención preventiva, es a todas luces un uso arbitrario de la coerción estatal, propio de
regímenes autoritarios, que recae sobre una persona que goza constitucionalmente de la garantía
de presunción de inocencia, en tanto no se declare su culpabilidad mediante sentencia
condenatoria ejecutoriada, motivo por el que la causal desarrollada en el numeral 3) del Art. 239
del CPP, además de ser un limitación temporal a la detención preventiva, es un mecanismo de
sanción a la negligencia del Estado en su función persecutoria del delito, toda vez que no ha
extremado los esfuerzos y mecanismos necesarios para definir la situación jurídico procesal del
imputado o acusado. Por tanto, para la procedencia de esta causal el único requisito exigible es
la verificación del vencimiento de los plazos señalados al efecto, dieciocho meses sin que se
haya dictado acusación o de treinta y seis meses sin que se hubiese dictado sentencia, por lo que
en el caso concreto de advertirse que persiste la necesidad de cautela, la autoridad jurisdiccional
deberá aplicar las medidas sustitutivas correspondientes de acuerdo al último párrafo del artículo
citado.

4. Interpretación constitucional del último párrafo del art. 239 de la Ley 1970 y la carga de
la prueba en la cesación de la detención

El último párrafo del art. 239 señala que, vencidos los plazos previstos en los numerales 2) y 3),
el juez o tribunal aplicará las medidas cautelares que correspondan previstas en el art. 240 del
CPP, siempre que la demora no sea atribuible a los actos dilatorios del imputado. Esta última
condición, a la que está supeditada la cesación de la detención preventiva, en los casos de los
numerales 2) y 3), debe ser interpretada y analizada bajo la garantía de la presunción de
inocencia y el principio de la carga de la prueba en materia penal. Al efecto, el art. 6 del CPP, en
su tercer párrafo establece que: “La carga de la prueba corresponde a los acusadores, y se
prohíbe toda presunción de culpabilidad.”. El fundamento del principio, ha sido desarrollado
acertadamente en los siguientes términos: “…la obligación de investigar la verdad incumbe a los
órganos del Estado, sin que la actividad probatoria (que a ellos les corresponde, en primer lugar)
y el objeto de la prueba (indisponible) puedan encontrar límites derivados de la conducta de las
partes; pero si el proceso tutela la libertad personal, y el imputado es inocente hasta que no se
acredite y declare su culpabilidad, me parece indudable que el dogma constitucional excluye en
absoluto la carga probatoria del imputado; éste no tiene el deber de probar nada, aunque tenga el
derecho de hacerlo, pues goza de una situación jurídica que no requiere ser construida, sino
que debe ser destruida; si no se le prueba su culpabilidad seguirá siendo inocente, y por lo tanto,
deberá ser absuelto.” (Vélez Mariconde, Alfredo, op. cit., pg. 47). De lo anotado se establece
como principio general, que la carga de la prueba en materia penal corresponde al acusador
público y/o particular.

A diferencia del proceso civil, donde la teoría de la carga de la prueba (onus probandi) establece
como regla general que la actividad probatoria es responsabilidad de las partes, debiendo cada
una demostrar los hechos invocados, al actor los que fundan su demanda, y el demandado los
impeditivos que invoca en su defensa; se tiene que en el proceso penal no existe una estructura
similar, toda vez que la reconstrucción de la verdad, no queda librada a la voluntad de las partes,
al ser una actividad eminentemente estatal, motivo por el que si el juez o tribunal advierte una
duda razonable sobre la culpabilidad del imputado, debe absolverlo, en aplicación del principio

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 297


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

in dubio pro reo o de favorabilidad, otra derivación de la garantía de presunción de inocencia,


consagrado en el art. 116.I de la Ley Fundamental.

No obstante lo anotado precedentemente, el extinto Tribunal Constitucional, en sus SSCC


0252/2003-R, 2517/2010-R, 0227/2004-R, 1110/2005-R, sostuvo que “excepcionalmente” la
carga de la prueba en materia de cesación de la detención preventiva por la causal del numeral 1)
del art. 239 del CPP, corresponde al imputado, tesis errónea, toda vez que si bien el numeral 1)
refiere que la detención cesará cuando nuevos elementos de juicio demuestren que no concurren
los motivos que la fundaron o tornen conveniente sustituirla por otra medida, de ninguna manera
dispone que la carga procesal de probar estos nuevos elementos o el desvirtuar los existentes
recaiga sobre el procesado, máxime si se interpreta la norma citada de forma armónica con
relación al art. 6 del mismo cuerpo legal.

Ahora bien, la cesación de la detención preventiva, aunque la norma expresamente no lo


indique, es tramitada por la vía incidental, señalándose audiencia de consideración al efecto y
notificándose al Ministerio Público, y al Querellante si hubiere, motivo por el que en dicha
audiencia, no se debate la inocencia o culpabilidad del procesado, sino que se pone a
consideración del juez o tribunal, si al procesado le asiste el derecho de ejercer su defensa en
libertad, motivo por el que éste expone ante la autoridad jurisdiccional los argumentos y
elementos de juicio que fundamenten su petitorio, o en su caso y con carácter previo, solicita al
Ministerio Público requiera ante las instancias públicas o privadas correspondientes, la remisión
de los elementos de juicio que a su criterio se encuentre disponibles, de manera clara e
individualizada, y que en consecuencia puedan ser examinados por la autoridad jurisdiccional en
audiencia oral y pública; ello parte del hecho irrefutable que si el procesado se encuentra privado
de libertad, es absurdo e irracional cargarle la obtención de los referidos elementos de juicio,
puesto que por su situación procesal no se encuentra en igualdad condiciones respecto a la parte
acusadora (Ministerio Público y/o Querellante) y por ende su derecho a la defensa se encuentra
disminuido, con mayor razón si se concluye que quien solicitó y fundamentó la detención
preventiva fue el acusador y no el procesado.

La línea jurisprudencial del anterior Tribunal citada supra, que solo contempla la causal del
numeral 1) del art. 239 del CPP, además de la observación anotada, fue objeto de confusión,
llegándose a distorsionar y extender sus alcances a todo el artículo en cuestión, incluidas las
modificaciones efectuada por la Ley 007 de 18 de mayo de 2010, como consta en la SC
1174/2011-R de 29 de agosto, que señalaba los siguiente: “Ahora bien, bajo esos parámetros, es
necesario señalar que la carga de la prueba, que excepcionalmente se asigna al imputado en el
trámite de la cesación de la detención preventiva, será extensiva a todos los aspectos y
solicitudes vinculadas a ella, sea respecto al fondo de la solicitud o a aspectos de forma o
procedimiento relativos a ella, así por ejemplo, respecto a la solicitud de suspensión de la
audiencia de consideración de las mismas o de fundamentación de apelación, cuando negada la
solicitud en primera instancia se impugne esa determinación”.

Con las modificaciones introducidas en la Ley 007 de 18 de mayo de 2010, la tesis errónea
amplió sus alcances, llegándose al extremo de interpretar, como en la presente acción de
libertad, que la carga de la prueba para demostrar que la demora no sea atribuible al imputado,
recae sobre el propio procesado, interpretación absurda y carente de todo fundamento jurídico.
Por lo expuesto, una interpretación acorde con la Constitución, orienta que en la cesación
de la detención preventiva solicitada por cualquiera de las causales previstas en los
numerales 2) y 3) del art. 239 del CPP, es el Ministerio Público y/o Querellante quienes
tienen la carga procesal de probar que la demora es atribuible a los actos dilatorios del
imputado, de manera precisa y fundamentada, que en caso de generar convicción en la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 298


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

autoridad jurisdiccional, ésta deberá pronunciarse conforme el último párrafo del Artículo
citado. En tal sentido, se debería reconducir toda la línea jurisprudencial citada relativa a
la cesación de detención preventiva, conforme los razonamientos anteriormente expuestos.

5. Análisis del caso concreto

Dentro del presente caso el accionante denunció que ni el Tribunal Quinto de Sentencia ni la
Sala Penal Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial de La Paz dieron una correcta
aplicación de la ley, respecto a la previsión contenida en el art. 239.2 del CPP, que claramente
establece que únicamente tiene que considerarse el transcurso del tiempo, sin que deba tomarse
en cuenta otros aspectos ajenos a esta exigencia legal, debido a que en su causa la detención
preventiva impuesta a su persona a excedido la pena mínima del delito más grave por el que fue
acusado, que es de dos años, encontrándose detenido por más de tres años al momento de
interponer la presente acción de libertad.

La Sentencia Constitucional, objeto del presente Voto Disidente, ha aplicado la Jurisprudencia


establecida mediante la SC 0805/2010-R de 2 de agosto, en la que citando a la SC 0034/2005-R
de 10 de enero, se reiteró que es el imputado quien debe demostrar con los elementos de
convicción necesarios, que los motivos que fundaron su detención preventiva han sido
modificados o ya no existen, aspectos que no sólo serán valorados por el Juez Cautelar sino por
el propio Tribunal de Alzada que conozca en apelación la Resolución que conceda o rechace la
casación de detención preventiva.

Sobre la base de lo anteriormente expuesto, este despacho, para el presente caso asume el
criterio establecido en los puntos 2, 3 y 4 del presente Voto Disidente, por lo que el hecho de
exigir que sea el propio imputado el que deba demostrar con elementos de convicción que los
motivos de su detención han sido modificado o no existen, son argumentos que no efectúan un
correcto análisis de la normativa legal en cuestión y su vinculación con los preceptos
constitucionales que nos toca interpretar y materializar.

Por los argumentos expuestos es que considero que al haber denegado la tutela solicitada bajo
los citados argumentos, no se actuó correctamente por lo que debió haberse concedido la tutela
solicitada.

Fdo. Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada


INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0042/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00038-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 01/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 32 a 33 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad, interpuesta por Ronny Andrés Egüez García contra Edgar

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 299


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Carrasco Sequeiros y William Torrez Tordoya, Vocales de la Sala Penal Primera del
Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Mediante memorial presentado el 11 de enero de 2012, cursante de fs. 19 a 26, el accionante


expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 14 de enero de 2011, Mireya Velarde Menacho, formuló denuncia por el presunto delito de
estupro cometido contra su hija; por lo que presentada la imputación formal, la Jueza Quinta de
Instrucción en lo Penal en audiencia de medidas cautelares del 18 de febrero del mismo año,
determinó su detención preventiva. Posteriormente, ante reiteradas solicitudes de cesación de la
misma, el 2 de junio de 2011 el Juez de la causa, por Auto Interlocutorio 121/2011 dio curso a
su solicitud, imponiéndole como medidas sustitutivas: a) Obligación de presentarse al Ministerio
Público cada semana a objeto de colaborar con la investigación; b) Prohibición de ponerse en
contacto con la víctima y la denunciante; c) Prohibición de ausentarse del departamento y del
país; y, d) Arraigo y fianza económica de Bs15 000.- (quince mil bolivianos).

La denunciante apeló el Auto Interlocutorio 121/2011, recurso radicado en la Sala Penal


Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, que por Auto de Vista 217 de 3
de octubre de 2011, determinó modificar en parte la Resolución impugnada disponiendo la
fianza económica de Bs20 000.- (veinte mil bolivianos), que fue honrada de manera “fiel”.
Luego de un tiempo, con el único afán de “venganza” y de causar perjuicio, la denunciante
solicitó la revocatoria de las medidas sustitutivas, amparada en una certificación emitida por la
Fiscal Margoth Vargas Jordán, donde refiere que no habría firmado el libro de asistencia los días
23 y 30 de septiembre de 2011. Así, en audiencia pública de 18 de noviembre del citado año, la
Jueza Quinta de Instrucción en lo Penal, saliendo por los fueros de la justicia y legalidad,
rechazó el incidente de revocatoria de medidas sustitutivas, bajo el argumento que, si bien es
cierto que el imputado no se presentó esas dos fechas a firmar el libro, su comportamiento
posterior -cumpliendo la presentación semanal y concurriendo a los que fue convocado-
denotaba que no existía peligro de fuga.

Ante dicha Resolución, la querellante interpuso recurso de apelación incidental y el 20 de


diciembre de 2011, los Vocales de la Sala Penal Primera en interpretación literal, incongruente,
“restrictiva” e ilegal resolvieron revocar el Auto de 18 de noviembre del indicado año,
disponiendo orden de aprehensión en su contra, con el argumento de que el certificado médico
presentado data de una fecha distinta a la que su persona no pudo firmar el libro de control de
cumplimiento de la medida sustitutiva, lo que la Jueza Quinta de Instrucción en lo Penal no
valoró, por lo tanto no estaba debidamente justificada la falta de firma en el libro; encontrándose
a la fecha ilegalmente procesado y perseguido, sin posibilidad alguna de impugnar en la vía
ordinaria el Auto de Vista que vulnera el derecho a la libertad y el debido proceso.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerados su derecho a la libertad y la garantía del debido proceso,


citando al efecto los arts. 23.I y III y 115 de la Constitución Política del Estado (CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 300


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicita se “admita” la acción de libertad y se disponga dejar sin efecto legal el Auto de Vista
231 de 20 de diciembre de 2011 y la orden de aprehensión, ordenando se dicte nuevo auto de
vista debidamente fundamentado, confirmando el Auto de 18 de noviembre de 2011 de la Jueza
Quinta de Instrucción en lo Penal.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 12 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 30
a 31 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó el memorial de acción de libertad y agregó: 1) El Auto de


Vista impugnado en ninguna parte hace una valoración integral de las medidas cautelares
referentes al peligro de fuga, de obstaculización o la reincidencia; en consecuencia, carece de
fundamentación y motivación; y, 2) El Tribunal no tomó en cuenta los presupuestos estipulados
en el art. 233 del Código de Procedimiento Penal (CPP) con relación al peligro de fuga y
obstaculización.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Edgar Carrasco Sequeiros y William Torrez Tordoya, Vocales de la Sala Penal Primera, no
asistieron a la audiencia ni presentaron informe alguno pese a su legal citación.

I.2.3. Resolución

El Juez Segundo de Sentencia del Tribunal Departamental de Santa Cruz, constituido en Juez de
garantías, por Resolución 01/2012 de 12 de enero, declaró “procedente” la tutela solicitada y en
consecuencia anuló el Auto de Vista 231, dictado por la Sala Penal Primera, quedando sin efecto
el mandamiento de detención preventiva, debiendo dicho Tribunal dictar una nueva resolución,
en la que considere la concurrencia o no de los requisitos del art. 233 con relación a los arts. 234
y 235 del CPP, en base a los siguientes fundamentos: i) Existe abundante jurisprudencia sobre la
motivación como componente del debido proceso y específicamente cuando se revocan medidas
sustitutivas, habiendo el Tribunal Constitucional establecido que no basta con probar el
incumplimiento de las medidas sustitutivas, sino que debe razonarse sobre la existencia de los
requisitos establecidos por los artículos del Código de Procedimiento Penal antes mencionados,
así -entre otras- las SSCC 0390/2005-R; 0623/2007-R y 089/2010-R; y, ii) La Sala Penal
Primera, al dictar el Auto de Vista 231, revocando las medidas sustitutivas del accionante,
lesionó el debido proceso en su componente del derecho a una resolución motivada, al no
fundamentar los riesgos procesales y justificar la concurrencia de los requisitos del art. 233 del
CPP con relación al 234 y 235 del mismo Código, lesión que está vinculada al derecho a la
libertad, porque en virtud a dicha Resolución el accionante se encuentra perseguido.

1.3. Trámite en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Al no haber obtenido consenso en la Sala Segunda, el proyecto de la Magistrada Relatora Dra.


Mirtha Camacho Quiroga, de conformidad al art. 30.1.6 de la Ley de Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), se procedió a convocar al Presidente del Tribunal Constitucional
Plurinacional a fin de dirimir con su voto el caso en análisis.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 301


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Por Resolución dictada en audiencia de 18 de noviembre de 2011, la Jueza Quinta de


Instrucción en lo Penal, rechazó el incidente planteado por la querellante Mireya Velarde
Menacho contra Ronny Andrés Eguez García, sobre la revocatoria de medidas sustitutivas a la
detención preventiva (fs. 6 a 11 vta.).

II.2. El 20 de diciembre de 2011, en audiencia de apelación de medida cautelar, la Sala Penal


Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, por Auto de Vista 231, revocó la
Resolución antes citada, disponiendo la revocatoria de las medidas sustitutivas a la detención
preventiva a favor de Ronny Andrés Eguez García, ordenando su detención preventiva,
debiendo “dictarse el mandamiento correspondiente” (sic), con los siguientes argumentos: a)
Revisado el cuaderno procesal se evidencia que en audiencia de medidas sustitutivas de 18 de
noviembre de 2011, corrió el certificado extendido por la Fiscal de Materia Margoth Vargas
Jordán, acreditaba que el imputado inasistió los días 23 y 30 de septiembre del dicho año a la
Fiscalía a objeto de firmar el libro correspondiente; b) El certificado médico extendido por
Javier Rivas da cuenta que el imputado se encontraba impedido del 27 al 30 de agosto de 2011,
por encontrarse internado con diagnóstico de dengue clásico, por lo que estaba legalmente
impedido de presentarse; c) La Jueza valoró indebidamente el documento, por cuanto el
incumplimiento de firmar los libros correspondiente fueron los días 23 y 30 de septiembre del
mismo año, “habiendo vulnerado las disposiciones del art. 124 y 173 que le exige, debe dictar
un auto debidamente fundamentado con la exposición de los motivos de hecho y de derecho en
que basan su decisión” (sic); y, d) No se hizo una valoración integral, armónica y conjunta de las
pruebas acompañadas, asignando un valor que no tiene el certificado médico, porque acredita
que el impedimento fue en agosto y su inconcurrencia se suscitó en septiembre (fs. 12 a 18).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de su derecho a la libertad y la garantía del debido proceso;


por cuanto las autoridades demandadas revocaron las medidas sustitutivas que le fueron
impuestas, a través de una Resolución carente de fundamentación y motivación, en la que no se
efectuó una valoración integral de los riesgos procesales de fuga y obstaculización. Por lo
expuesto, corresponde analizar en revisión, si en el caso concreto se debe otorgar o denegar la
tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y alcances de la acción de libertad

La acción de libertad, está instituida por la Ley Fundamental como una acción de defensa que
tiene por objeto la protección de los derechos a la libertad física, libertad de locomoción y a la
vida, de toda persona, cuando considere que su vida esté en peligro, ilegalmente perseguida o
indebidamente procesada o privada de libertad personal, conforme lo establece el art. 125 de la
CPE.

De acuerdo a ello, el art. 65 de la LTCP, al determinar el objeto de esta acción constitucional


extraordinaria, establece que es de tramitación sumarísima con el fin de garantizar la protección
de los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción para su restablecimiento
inmediato y efectivo, en los casos que se evidencie su restricción o supresión.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 302


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el marco de los preceptos normativos citados, corresponde ingresar al análisis de la


problemática planteada por la parte accionante, a fin de determinar si la misma procede en el
ámbito de la naturaleza y alcance de esta acción tutelar y la materialización de su finalidad.

III.2. La revocatoria de las medidas sustitutivas y la imposición de otra medida cautelar

La norma contenida en el art. 247 del CPP, establece las causales de revocación de las medidas
sustitutivas, disponiendo además que “La revocación dará lugar a la detención preventiva en los
casos en que esta medida cautelar sea procedente”.

Por su parte, el art. 233 del mismo Código, dispone que la detención preventiva procede cuando
el juzgador evidencia la concurrencia de los presupuestos contenidos en los arts. 234 y 235 del
CPP, referidos a la existencia de elementos de convicción suficientes para sostener la
probabilidad de autoría o participación en el hecho punible y además la existencia de peligro de
fuga o de obstaculización.

De las normas procesales citadas se infiere que ante el incumplimiento de una medida
sustitutiva, en efecto procede su revocatoria por el juzgador, quien para determinar la detención
preventiva, deberá evaluar si la misma procede en el marco de la valoración integral de los
presupuestos contenidos en el art. 233 del CPP, cuyos elementos constitutivos se encuentran
desarrollados en los arts. 234 y 235 del mismo cuerpo normativo.

Al respecto, el Tribunal Constitucional asumió los siguientes entendimientos que son


coincidentes con los expresados precedentemente, refiriendo: “si bien es cierto que el
incumplimiento de cualquiera de las medidas sustitutivas a la detención es una causal de
revocatoria de las mismas conforme lo determina el art. 247-1) CPP, no es menos cierto que
cuando el juzgador como consecuencia de la revocatoria de las medidas sustitutivas a la
detención va a imponer la medida cautelar de detención preventiva debe inexcusablemente
observar la previsión de los arts. 233 y 236 CPP, caso contrario incurre en detención indebida”
(SC 1204/2003-R de 25 de agosto).

Razonamiento que a su vez fue ampliado por la SC 0104/2010-R, de 10 de mayo que determina
la fundamentación y motivación de la resolución que imponga la medida cautelar, señalando:
“…la exigencia de que el juez o tribunal que conoce la causa, sea quien disponga la
revocatoria de las mismas, pero previa verificación de existencia de uno de los supuestos
establecidos en el mismo procedimiento y a través de una resolución expresa, motivada y
fundamentada; ello, en razón a que si bien la autoridad judicial, ante el incumplimiento de las
medidas sustitutivas impuestas, está facultada para revocarlas, no es menos evidente que su
decisión debe responder a una valoración objetiva sobre si concurren o no las causales para
ello, exigencia que se sustenta en el equilibrio que debe existir entre la búsqueda de la
eficiencia de la persecución penal y la salvaguarda de los derechos fundamentales protegidos
por la Ley Fundamental, garantía que se refrenda cuando la revocatoria emanada por
Resolución de autoridad competente, se encuentra además debidamente motivada; es decir, que
debe existir una resolución de revocatoria expresa que de forma concisa y razonable, desarrolle
las razones que llevaron al Juez o Tribunal a tomar la decisión, y de ese modo las partes
procesales tengan conocimiento claro de las razones en que se fundamentó la Resolución”.

Se concluye entonces, que la revocatoria de medidas sustitutivas no implica que en forma directa
y sin ninguna fundamentación y menos aún valoración de los riesgos procesales, se determine la
detención preventiva, sino que al contrario, conforme lo determina el mismo art. 247 del CPP,
sólo puede disponerse la detención preventiva cuando sea procedente, y para determinar su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 303


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

procedencia, necesariamente se tiene que efectuar una evaluación respecto a la concurrencia de


los requisitos previstos por el art. 233 del citado Código y, de manera concreta, una evaluación
integral de las circunstancias para determinar los riesgos procesales de fuga y obstaculización.

Es necesario también precisar, que la evaluación de los riesgos procesales citados -que en su
caso determinarán la detención preventiva- tienen que reflejarse en una resolución debidamente
fundamentada, que de forma inequívoca manifieste la concurrencia de los presupuestos en base
a la valoración integral de los hechos y prueba presentada por las partes y que hubiesen dado la
suficiente convicción en el juzgador sobre la procedencia de la detención preventiva, máxime si
se considera que la fundamentación y evaluación integral, constituyen exigencias impuestas al
juez por los arts. 124, 234, 235 y 236 del CPP.

III.3. Análisis del caso concreto

En el presente caso, el accionante refiere que dentro del proceso penal seguido en su contra, en
apelación, los Vocales demandados revocaron la Resolución que mantenía subsistentes las
medidas sustitutivas que le habían sido impuestas, revocando las mismas y disponiendo su
detención preventiva con el simple argumento de que la falta de firma de un día en el libro
correspondiente, no estaba debidamente justificada.

De la revisión de los antecedentes presentados, se tiene que la Jueza Quinta de Instrucción en lo


Penal, rechazó la solicitud de la parte querellante de revocatoria de medidas sustitutivas;
determinación que, apelada, mereció el Auto de Vista 231, dictado por las autoridades ahora
demandadas, quienes revocaron las medidas sustitutivas impuestas al accionante disponiendo su
detención preventiva, con los siguientes argumentos: 1) De acuerdo a certificado médico, se
evidenciaba que del 27 al 30 de agosto el imputado se encontraba legalmente impedido de asistir
a firmar el libro, puesto que sufría de dengue clásico; y, 2) Sin embargo, el incumplimiento de
firmar los libros correspondía a los días 23 y 30 de septiembre, por tanto, no se efectuó una
valoración integral de las pruebas acompañadas, asignando al certificado médico un valor que
no tenía, pues acreditaba que el impedimento fue en agosto, obviándose que la inconcurrencia se
suscitó en septiembre.

De la relación efectuada, se evidencia que existió en efecto una lesión al derecho a la libertad del
accionante y vulneración a la garantía del debido proceso, por cuanto conforme lo determina el
art. 247 inc. 1) del CPP, ante el incumplimiento de las medidas sustitutivas, es evidente que el
juzgador puede revocarlas, como ocurrió en el presente caso, en el que el certificado médico
daría cuenta que el impedimento legal para concurrir a la Fiscalía para la firma de libro, se
suscitó en agosto y no en septiembre, y por ende los dos días que faltó el accionante a la firma
del libro no estaban debidamente justificados; sin embargo, es imprescindible considerar que la
revocatoria de medidas sustitutivas debe estar debidamente fundamentada, es decir, que
necesariamente corresponde que emane de una resolución que en forma motivada exprese las
razones que llevaron al juzgador a determinar un evidente incumplimiento de las medidas
impuestas, lo que conlleva a su vez a que si la revocatoria generará la detención preventiva, ésta
no opera en forma automática, sino que se debe evaluar si concurren los presupuestos para dicha
detención.

Al respecto, conforme se estableció en el fundamento jurídico precedente, corresponde precisar


que si bien es evidente que el mismo art. 247 del CPP determina que se puede imponer la
detención preventiva, siempre y cuando la misma proceda, no es menos cierto que dicha
procedencia se refiere a la valoración integral de la concurrencia de los presupuestos
establecidos en el art. 233 del mismo cuerpo legal, cuyos elementos constitutivos se encuentran

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 304


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

desarrollados en los preceptos siguientes 234 y 235, situación que no se advierte se hubiese
cumplido en el presente caso.

En efecto, del contenido de la Resolución emitida por los Vocales demandados, se tiene que la
revocatoria de las medidas sustitutivas se produjo en razón de la inconcurrencia por dos días del
accionante a la Fiscalía para firmar el libro respectivo, circunstancia que motivó además su
detención preventiva, pero en forma directa y sin que las autoridades demandadas hubiesen
determinado su procedencia, efectuando para ello una valoración integral de los riesgos
procesales previstos por el procedimiento penal y su concurrencia y existencia en el caso
concreto, actuación que se constituye en ilegal e indebida, dado que la revocatoria de medidas
sustitutivas, no determina por sí sola la detención preventiva, como ocurrió en el caso en
estudio, al contrario para determinar dicha medida cautelar, los Vocales demandados tenían la
obligación de hacerlo mediante una resolución motivada y emitida conforme los requisitos
legales que sustentaban la imposición de la detención preventiva. Máxime si se considera que la
fundamentación y evaluación integral, constituyen exigencias impuestas al juzgador por los arts.
124, 234, 235 y 236 del CPP.

En consecuencia, al haber dispuestos los Vocales demandados en forma directa la detención


preventiva, sin valoración alguna de la concurrencia de los riesgos procesales previstos por ley y
menos aún con la fundamentación que requería el asumir esa determinación, incurrieron en
actuación indebida que lesionó el derecho a la libertad y la garantía del debido proceso
invocados por el accionante, por lo que corresponde otorgar la tutela solicitada por falta de
fundamentación y motivación de la resolución que impuso la medida cautelar.

Por lo precedentemente señalado, el Juez de garantías al haber declarado “procedente” la


acción de libertad, aunque con errónea terminología, ha efectuado una adecuada compulsa de los
antecedentes procesales y aplicado debidamente los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12. 7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: CONCEDER la tutela solicitada en los
términos dispuestos por el Juez de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Se hace constar que la Magistrada Dra. Mirtha Camacho Quiroga, primera relatora, es de voto
disidente.

Fdo. Dr. Ruddy José Flores Monterrey.-Presidente


Dr. Gualberto Cusi Mamani.Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

VOTO DISIDENTE
Sucre, 27 de marzo de 2012

Sentencia: 0042/2012 de 26 de marzo


Expediente: 00038-2012-01-AL
Materia: Acción de Libertad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 305
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Partes: Ronny Andrés Egues García contra Edgar Carrasco Sequeiros y


William Torrez Tordoya, Vocales de la Sala Penal Primera del
Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.
Departamento: Santa Cruz
Mag. Disidente: Dra. Mirtha Camacho Quiroga

La suscrita Magistrada, presenta su voto disidente en el fondo, con relación a la SC 0042/2012-


R de 26 de marzo, conforme a los siguientes fundamentos:

1. Fundamentación de las resoluciones sobre medidas cautelares

En relación a la fundamentación de las resoluciones de medidas cautelares la jurisprudencia


desarrollada por este Tribunal, estableció a través de la SC 0455/2010-R de 28 de junio de 2010
que:

“El art. 124 del CPP, prescribe que: “Las sentencias y autos interlocutorios serán
fundamentados. Expresarán los motivos de hecho en que basan sus decisiones y el valor
otorgado a los medios de prueba. La fundamentación no podrá ser reemplazada por la simple
relación de los documentos o la mención de los requerimientos de las partes”. Dicha
disposición legal guarda armonía con la norma contenida en el art. 236 inc. 3) del mismo
cuerpo de leyes, referido a la forma y contenido de la decisión, señalando que se debe hacer
una fundamentación: “…expresa sobre los presupuestos que motivan la detención, con cita de
las normas legales aplicables”.
Al respecto el Tribunal Constitucional, en su jurisprudencia, ha señalado que las resoluciones
sobre medidas cautelares deben estar debidamente fundamentadas, conforme lo exigen los arts.
236 inc. 3) y 124 del CPP, última norma que determina que las sentencias y autos
interlocutorios deben expresar los motivos de hecho y de derecho en que basan sus decisiones, y
el valor otorgado a los medios de prueba, no pudiendo ser reemplazada la fundamentación por
la simple relación de los documentos o la mención de los requerimientos de las partes. Es decir,
que toda resolución que se emita, debe contener, ineludiblemente, la motivación suficiente y
necesaria, a través de la cual se explique el por qué o la razón por la que se llegó a tal decisión,
de manera breve, concisa y razonable”.

2. Análisis del caso concreto

En el presente caso el accionante, denunció la vulneración de sus derechos a la libertad y a la


garantía del debido proceso; toda vez, que las autoridades demandadas, en audiencia de
apelación de medidas cautelares mediante Auto de Vista 231/2001 de 20 de diciembre,
resolvieron revocar el Auto Interlocutorio de 18 de noviembre de 2011, que fue pronunciada por
la Jueza Quinta de Instrucción en lo Penal, disponiendo en consecuencia su detención preventiva
con el respectivo mandamiento de aprehensión, con el argumento de que el certificado médico
presentado no coincidía en las fechas en las que no pudo presentarse para poder cumplir con la
medida sustitutiva de presentarse para firmar el libro de control de cumplimiento de la medida
sustitutiva que se le impuso, por lo que la Jueza a quo no valoró tal circunstancia; encontrándose
a la fecha ilegalmente procesado y perseguido, afirmando, a su criterio, que la Resolución
cuestionada carece de la debida fundamentación.

Al respecto cabe señalar que, de acuerdo a los antecedentes procesales cursantes en obrados, se
evidenció que los Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de
Santa Cruz, hoy demandados, al pronunciar el Auto de Vista 231/2011 de 20 de diciembre,
ahora cuestionada, luego de un análisis valorativo, fáctico y jurídico de los elementos

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 306


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

presentados, advirtieron que en la audiencia del 18 de noviembre de 2011, en el que se analizó la


revocatoria de medidas sustitutivas solicitada por la parte civil y/ó querellante -Mireya Velarde
Menacho-, se presentó certificado que fue extendido por la Fiscal de Materia Margoth Vargas
Jordán, de cuyo contenido, se acreditó de manera documental que el imputado hoy accionante
no firmó el libro de asistencia correspondiente a los días 23 y 30 de septiembre de 2011; sin
embargo, la Jueza aquo en el Auto Interlocutorio de 18 de noviembre de 2011, justificó que
dicha inasistencia se encontraba respaldada por el certificado médico, que acreditaba que el
imputado por motivos de salud- dengue clásico- fue atendido el 27 de agosto de 2011, e
internado del 28 al 30 del mismo mes y año, lo que no justificaba su inasistencia.

Ternemos entonces, que por las pruebas aportadas por el propio accionante, su enfermedad fue
atendida en el mes de agosto, a finales de agosto para ser más exactos, y su inasistencia para
firmar el respectivo libro, fue en el mes de septiembre, en las fechas del 23 y el 30 de
septiembre, por lo que el mencionado certificado médico más bien confirma el argumento
utilizado por la autoridad demandada.

Este aspecto debió ser tomado en cuenta en la audiencia de la acción de libertad, sin embargo no
fue observado de manera adecuada en dicha audiencia, ya que el accionante claramente
incumplió una medida sustitutiva impuesta sin justificación alguna, por lo que corresponde
aplicar lo establecido por el art. 247. 1 del CPP que señala que las medidas sustitutivas a la
detención preventiva podrán ser revocadas por las siguientes causales: 1) Cuando el
imputado incumpla cualesquiera de las obligaciones impuestas; 2) Cuando se compruebe
que el imputado realiza actos preparatorios de fuga o de obstaculización en la averiguación de la
verdad; 3) Cuando se inicie en contra del imputado un nuevo proceso penal por la comisión de
otro delito; y, la revocación dará lugar a la detención preventiva en los casos en que esta medida
cautelar sea procedente.

En consecuencia las autoridades hoy demandadas, al revocar las medidas sustitutivas por la
detención preventiva, mediante Auto de Vista 231/2011, lo hicieron porque el imputado hoy
accionante incumplió una de las obligaciones impuestas por el Juez Octavo de Instrucción en lo
Penal mediante Auto de 2 de junio de 2011, consistente en presentarse ante el Ministerio Público
cada semana a objeto de colaborar con la investigación, lo que desvirtúa lo aseverado en la
presente acción de libertad de que dichas autoridades no hubieren realizado una debida
fundamentación fáctica jurídica, por cuanto explican los motivos e identifican los documentales
sobre las cuales, se basan para determinar la existencia de los presupuestos enunciados, sin
vulnerar los derechos fundamentales invocados por el accionante, razón por la cual, no se podía
otorgar la tutela solicitada.

La Sentencia Constitucional objeto de la presente disidencia, al haber concedido la tutela por


una supuesta falta de fundamentación, es decir, por no haber dictado una resolución motivada
por parte de las autoridades demandadas, no tomaron en cuenta que en el presente caso si hubo
una adecuada fundamentación, que encuentra su base en el punto 1 del presente voto disidente,
que el accionante no pudo contrarrestar por los elementos de prueba presentados por el mismo.

Por los argumentos expuestos es que considero que al haber concedido la tutela solicitada bajo
los citados argumentos, no se actuó correctamente por lo que debió haberse denegado la tutela
solicitada.

Fdo. Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 307


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0049/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00020-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 001/2012 de 13 de enero, cursante de fs. 78 a 82, pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Héctor Rogelio Gutiérrez Soliz en
representación sin mandato de Martha Huanca Troche contra Elías Fernando Ganam
Cortez y Ramiro López Guzmán, Presidente de la Sala Penal Segunda y Presidente de
la Sala Penal Tercera, respectivamente, del Tribunal Departamental de Justicia de La
Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Mediante memorial presentado el 12 de enero de 2012, cursante de fs. 28 a 30 vta., el accionante


expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

Su representada Martha Huanca Troche, como consecuencia de una denuncia iniciada en su


contra por el delito de tráfico de sustancias controladas, fue aprehendida y posteriormente, en
audiencia cautelar, efectuada el 7 de octubre de 2011, se dispuso su detención domiciliaria sin
considerar su grave estado de salud, razón por la cual, tanto el Ministerio Público como su
representada interpusieron apelación contra la Resolución 307/2011 de 6 de octubre.

Continúa señalando que los vocales de la Sala Penal Segunda, revocaron la Resolución
307/2011 de 6 de octubre y dispusieron la detención preventiva de Martha Huanca Troche,
afectando así su derecho a la libertad física, a la salud, a la vida y al debido proceso.

Así también, el accionante señala: “los Vocales de la Sala Penal Segunda de ninguna manera
valoran los severos problemas de salud que mi mandante presenta, conforme al Certificado
Médico de fecha 05 de Octubre de 2011…” (sic). Asimismo, indica que las autoridades
demandadas, tampoco consideraron el certificado médico de 10 de octubre de 2011, a pesar de
haber puesto en conocimiento del Juez cautelar, dichos antecedentes médicos a través del
memorial de 12 del referido mes y año.

Denuncia también el accionante que ambas apelaciones; es decir, la presentada por el Ministerio
Público y de su parte, debieron ser valoradas en igualdad de condiciones, aspecto que no sucedió
denunciando expresamente que: “ni siquiera la apelación interpuesta por mi mandante ha sido
expuesta ni fundamentada” (sic).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 308


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

Señala como lesionados los derechos de su representada a la libertad, a la salud, a la vida, a la


defensa; y, de la garantía al debido proceso, citando al efecto los arts. 13. I, 14.III, IV y V, 15.I,
18.I y II, 24, 109, 115.II, 116 y 119.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “viable” la tutela constitucional impetrada y la nulidad de la Resolución


04/2012 de 9 de enero, emitida por la Sala Penal Segunda, mediante la cual, se revoca la
Resolución 307/2011, pidiendo que esta instancia, vuelva a pronunciarse a la brevedad posible,
sobre su apelación, fundamentando y valorando integralmente todos los elementos de
convicción aportados.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

En audiencia pública celebrada el 13 de enero de 2012, conforme consta en el acta cursante de


fs. 71 a 77, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de la parte accionante ratificó los términos del memorial de demanda y los amplió
señalando lo siguiente: a) La Resolución 04/2012, emitida por los codemandados, carece de
fundamentación para haber determinar una medida más gravosa en una etapa de investigación;
b) No establece una relación adecuada entre la prueba y la norma, ni valora de manera integral
los elementos de convicción; c) Tampoco se pronunció sobre ninguno de los extremos contenidos en
la apelación incidental que presentó; d) Cuando plantearon complementación y enmienda,
reclamando la falta de motivación sobre los agravios deducidos en su impugnación, obtuvieron
como respuesta, el no ha lugar; e) No obstante que en reiteradas oportunidades, solicitaron
oportunamente y de manera fundamentada, la homologación de los certificados médicos
correspondientes a la imputada, el Fiscal les negó, señalando que se debería pedir conforme a
procedimiento, sin exponer los motivos de su rechazo, violentando su derecho de petición; y, f)
La imputada venía cumpliendo con todas y cada una de las disposiciones emitidas por el Juez
cautelar, se encuentra bajo detención domiciliaria y arraigada, prestó fianza económica y ofreció
garantes personales.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los demandados Elías Fernando Ganam Cortez y Ramiro López Guzmán, no asistieron a la
audiencia señalada, empero, presentaron informe escrito que cursa a “fs. 70 y vta.”, en el que
mencionaron lo siguiente: 1) Producto de las apelaciones presentadas por el Ministerio Público y
por la parte imputada, radicó en su despacho el proceso penal seguido por el Ministerio Público
contra Martha Huanca Troche por la presunta comisión del delito de ganancias ilícitas,
celebrándose la audiencia para su consideración el 9 de enero de 2012; y, 2) En los fundamentos
de la Resolución 04/2012, se tiene que no son evidentes los extremos denunciados por el
accionante, puesto que se valoraron todos los elementos de convicción aportados.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Jueza Segunda de Sentencia del Tribunal Departamental de La Paz,


en suplencia legal del Juzgado Primero, constituida en Jueza de garantías, pronunció la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 309


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Resolución 001/2012 de 13 de enero, cursante de fs. 78 a 82, por la que concedió la tutela
impetrada, disponiendo que las autoridades jurisdiccionales demandadas en tiempo prudencial,
dicten nuevo fallo, únicamente en atención a las apelaciones formuladas de la Resolución
307/2011 de 6 de octubre; es decir, respecto a los puntos apelados, asimismo, estando la
imputada gozando de detención domiciliaria sin custodio, que ésta permanezca en ese estado,
debiendo el Juez de la causa emitir el correspondiente mandamiento de libertad; bajo los
siguientes argumentos de orden jurídico constitucional: i) La Resolución 004/2012, dictada por
la Sala Penal Segunda en grado de apelación incidental de la medida cautelar, contiene
fundamentación legal sobre el recurso formulado por el Ministerio Público dando lugar a la
revocación de medidas sustitutivas a la detención preventiva; y, ii) Respecto a la apelación
planteada por la parte accionante, a efectos de su inviabilidad, no se fundamenta el fallo,
limitándose sólo a referirse a su rechazo en tres líneas, contraviniendo el art. 124 del Código de
Procedimiento Penal (CPP).

I.3. Tramite Procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Al no haber obtenido consenso en Sala el proyecto de la Magistrada Relatora, Dra. Ligia Mónica
Velásquez Castaños, de conformidad al art. 30.I.6. de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), se procedió a convocar al Presidente del Tribunal Constitucional
Plurinacional a fin de dirimir con su voto el caso de análisis.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Se colige que mediante Resolución 307/2011 de 6 de octubre, el Juez Octavo de


Instrucción en lo Penal, en suplencia legal del Juzgado Séptimo, dispuso la aplicación de
medidas sustitutivas a la detención preventiva para la imputada Martha Huanca Troche,
determinándose entre otras, su detención domiciliaria, así como la incautación de sus bienes (fs.
13 a 18).

II.2. Establece también que en relación a la determinación antes señalada, en audiencia, el


abogado de la ahora parte accionante, en aplicación del art. 251 del CPP, apeló en cuanto a la
determinación de incautación de bienes (fs. 17 y 18).

II.3. Juan José Quispe Ulo, en su calidad de Fiscal de Materia asignado al caso, por memorial de
6 de octubre de 2011 -no figurando la fecha de su recepción-, presentó apelación contra la
Resolución 307/2011, cuestionando la valoración del Juez cautelar en relación al domicilio de la
imputada y los riesgos procesales, pidiendo de manera expresa se revoque la citada Resolución y
se determine la detención preventiva de la representada del accionante (fs. 24 y vta.).

II.4. Se evidencia también que Martha Huanca Troche, por memorial recepcionado el 8 de
octubre de 2011, interpuso recurso de apelación contra la Resolución 307/2011, alegando los
siguientes aspectos: i) Cuestiona determinación de la incautación de sus bienes; ii) Denuncia la
falta de motivación y congruencia del fallo impugnado; iii) Alega la vulneración al debido
proceso y al trabajo por haberse dispuesto su detención domiciliaria; asimismo, como prueba
ofrece de manera expresa todo el cuaderno de actuaciones procesales (fs. 25 a 26 vta.).

II.5. Por memorial de 10 de octubre de 2011, Martha Huanca Troche, puso en conocimiento del
Juez Séptimo de Instrucción en lo Penal, su estado de salud y pidió que se ordene su salida

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 310


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

inmediata de las celdas de la entonces Corte Superior de Distrito, para el cumplimiento de las
medidas sustitutivas dispuestas; se evidencia además que alegó encontrarse detenida por no
existir escoltas (fs. 22 y vta.). Al citado memorial, se adjuntaron dos certificados médicos, de 5 y
de 10 de octubre de 2011 (fs. 20 a 21).

II.6. Mediante memorial de 12 de octubre de 2011, Martha Huanca Troche, solicitó al Juez
Séptimo de Instrucción en lo Penal, la modificación de las medidas sustitutivas impuestas,
arguyendo que la Resolución 307/2011, dispuso su detención domiciliaria con custodia; sin
embargo, al no existir personal disponible para ese efecto, considerando su grave estado de salud
y que desde la determinación de su detención domiciliaria, se encuentra detenida en celdas de la
Corte Superior de Distrito, se disponga su inmediata libertad, pidiendo que cumpla su
determinación pero sin custodios (fs. 19 y vta.).

II.7. Cursa en antecedentes el acta de registro de audiencia pública de consideración de


modificación de medidas cautelares de 18 de octubre de 2011, a través de la cual, se evidencia
que la procesada solicitó: a) La modificación de las medidas impuestas por no existir escoltas
mujeres para hacer cumplir la anterior determinación de detención domiciliaria; y b) Destacó el
estado de salud de Martha Huanca Troche, debido a afecciones renales y cardiacas, señalando
que éstas fueron debidamente certificadas. Por su parte, el Ministerio Público señaló que existe
una apelación pendiente contra la referida Resolución, por lo que al no haberse retirado la
misma esta autoridad, no tendría competencia para ingresar al análisis de fondo de la petición
(fs. 7 a 9 vta.).

II.8. Se concluye que por Resolución 04/2012 de 9 de enero, Elías Fernando Ganam Cortez,
Presidente de la Sala Penal Segunda y Ramiro López Guzmán, en su calidad de Vocal
convocado, en mérito a la apelación presentada por ambas partes procesales contra la
Resolución 307/2011, declararon admisibles ambas apelaciones y revocaron el indicado fallo,
disponiendo la detención preventiva de la imputada Martha Huanca Troche. Se establece que
este fallo, contra el cual se activó la presente acción de libertad, se encuentra estructurado de la
siguiente manera: a) En el primer considerando, se hace referencia a la Resolución impugnada;
la interposición de las apelaciones por ambas partes; y, la convocatoria a otro Vocal; b) El
segundo considerando, resume la fundamentación del Ministerio Público; c) También en el
segundo considerando, se plasma la intervención y fundamentación del abogado defensor de la
ahora accionante, el cual, de acuerdo al contenido de la Resolución, se refiere a tópicos
referentes al domicilio de la imputada y los riesgos procesales; d) De la misma forma, en el
segundo considerando, consta la fundamentación del Vocal convocado; e) El tercer
considerando plasma las conclusiones, señalando de manera expresa: “Que, así vistos los
antecedentes para esta resolución este Tribunal compulsando los fundamentos expuestos por las
intervenciones orales como del Representante del Ministerio Público así como abogados de la
parte imputada, voto del vocal convocado, los certificados médicos presentados, y la revisión
del contenido de la resolución cuestionada. De esa compulsa y valoración de manera uniforme
se establece….” (sic) (resaltado nuestro) (fs. 44 a 47).

II.9. Se establece también que por memorial de 9 de enero de 2012, la representada del
accionante, interpuso recuso de complementación aclaración y enmienda contra la Resolución
de la misma fecha, a través de la cual, pidió que se aclare y complemente: a) La omisión de
valoración de su grave estado de salud y el no haberse pronunciado en relación a este aspecto; y,
b) El por qué únicamente se tramitó la apelación del Ministerio Público (fs. 60 y vta.).

II.10. Asimismo, se evidencia que por Auto de 10 de enero de 2012, se respondió a la solicitud
de complementación, aclaración y enmienda descrita supra, señalándose lo siguiente: a)

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 311


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

“VISTOS: La solicitud realizada por la impetrante en relación a que no se habría valorado el


estado de salud de la misma, es necesario señalar que en el Auto de Vista N° 04/2012 se ha
tomado en cuenta tal aspecto ya que los Centros Penitenciarios de la ciudad cuentan con
médicos, así mismo los detenidos preventivos pueden solicitar las respectivas salidas judiciales
para atención médica a los Juzgados de Ejecución Penal competentes” (sic) (fs. 48).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Con carácter previo, corresponde determinar el objeto y la causa de la petición, en ese sentido,
del contenido de la acción de libertad, se establece que el objeto de la petición de tutela a
través de la acción de libertad, es el resguardo a los derechos a la libertad, a la salud, a la vida
y a la defensa; así como la tutela de la garantía al debido proceso. También se establece que la
causa de la petición de tutela, es la Resolución 04/2012 de 9 de enero, la cual en mérito a la
denuncia de la accionante, contiene dos actos lesivos esenciales a los derechos antes referidos:
a) La revocación de la Resolución 307/2011 y la consecuente detención preventiva contra la
ahora accionante, sin responder ni fundamentar los argumentos desarrollados en la
apelación presentada por Martha Huanca Troche; y, b) La omisión en la valoración de los
certificados médicos presentados, los cuales, según el accionante, demostraban la patología
de la enfermedad de su representada.

En mérito al objeto y causa de la presente acción de tutela, la argumentación jurídica a ser


desarrollada, abordará los siguientes tópicos específicos: i) La motivación como exigencia de la
vigencia del Estado Constitucional y los requisitos para que este aspecto se tenga por cumplido;
y, ii) La omisión valoratoria como presupuesto para el ejercicio del control de constitucionalidad
a través de la acción de libertad.

Por los aspectos señalados, en revisión de la Resolución dictada por la Jueza de garantías,
corresponde dilucidar si tales extremos son evidentes y si constituyen persecución, aprehensión,
procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales, a fin de conceder o denegar la tutela
solicitada.

III.1. La acción de libertad. Su contenido esencial a la luz del Estado constitucional como
presupuesto de las bases estructurales del Estado Plurinacional de Bolivia

No podría abordarse la presente problemática sin analizar con carácter previo las bases
estructurales del nuevo modelo de Estado vigente a partir de la aprobación por referendo
constitucional de la Constitución de 2009; en ese contexto, el artículo primero de esta norma
suprema, plasma la llamada “clausula estructural”, en la cual, entre los muchos elementos
fundantes del nuevo diseño de Estado, se encuentra la característica en virtud de la cual, se
establece el carácter social y democrático del Estado Plurinacional de Bolivia.

A partir de este presupuesto, se conciben las acciones de defensa disciplinadas en el régimen


constitucional, como verdaderas garantías jurisdiccionales destinadas al resguardo de derechos
fundamentales y también con la finalidad esencial de asegurar la vigencia del Estado Social y
Democrático de Derecho.

En efecto, el Estado Social y Democrático de Derecho, como es el caso del Estado Plurinacional
de Bolivia, se encuentra estructurado sobre un postulado esencial: el respeto y eficacia máxima
de los derechos fundamentales, a cuyo efecto, la acción de libertad y las demás acciones de
defensa, son mecanismos idóneos para su resguardo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 312


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el marco de la dialéctica antes señalada, debe desarrollarse el contenido esencial de la acción


de libertad y sus presupuestos de activación, en ese orden, es menester establecer que a la luz del
Sistema Interamericano de Protección de Derechos Humanos, mecanismo que consagra el
respeto a los Derechos Humanos en el marco de la vigencia plena de Estados Sociales y
Democráticos de Derecho, debe establecerse que la piedra angular que estructura este
mecanismo supranacional de protección de Derechos Humanos, está constituida por la
Convención Americana de Derechos Humanos, instrumento que por su naturaleza y en armonía
con el mandato inserto en el art. 410 de la CPE, forma parte del bloque de constitucionalidad del
Estado Plurinacional de Bolivia; bajo esta perspectiva, el art. 25.1 de la mencionada
Convención, señala que “Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier
otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos que
violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución, la ley o la presente
Convención, aún cuando tal violación sea cometida por personas que actúen en ejercicio de sus
funciones oficiales”, disposición que de acuerdo a la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, constituye “…uno de los pilares básicos, no sólo de la Convención Americana, sino
del propio Estado de Derecho en una sociedad democrática en el sentido de la Convención”.

En armonía con los postulados desarrollados, el art. 125 de la CPE, disciplina la acción de
libertad señalando lo siguiente: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida y se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”, diseño que es perfectamente
compatible con la definición que la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha desarrollado
para este mecanismo, instancia que ha catalogado a esta institución como una herramienta
indispensable y de gran polivalencia al ser “el medio idóneo tanto para garantizar la libertad,
controlar el respeto a la vida e integridad de la persona, e impedir su desaparición o la
indeterminación de su lugar de detención, así como para proteger al individuo contra la tortura
u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes”.

Asimismo, cabe resaltar también que el instituto jurídico conocido en derecho comparado como
“hábeas corpus”, encuentra fundamento también en instrumentos normativos de orden
internacional como ser la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, la
Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, disposiciones normativas que inequívocamente forman parte del bloque de
constitucionalidad boliviano a la luz del art. 410 de la CPE.

En efecto, la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, aprobada en la


Novena Conferencia Internacional Americana, celebrada en abril de 1948 en Bogotá, establece
en su art. 25.3, que todo individuo que haya sido privado de su libertad tiene derecho a que el
juez verifique sin demora la legalidad de la medida y a ser juzgado sin dilación injustificada, o
de lo contrario, a ser puesto en libertad. Tiene derecho también a un tratamiento humano durante
la privación de su libertad.

Por su parte, la Declaración Universal de Derechos Humanos, adoptada y proclamada por la


Resolución de la Asamblea General 217 A (III) del 10 de diciembre de 1948, establece en su art.
8 que: “Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales
competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por
la constitución o por la ley…”. De la misma forma, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión de las naciones por la Asamblea

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 313


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

General de las Naciones Unidas, por medio de la Resolución 2200 A (XXI) el 16 de diciembre
de 1966, en su art. 9.4 consagra lo siguiente: “Toda persona que sea privada de libertad en
virtud de detención o prisión tendrá derecho a recurrir ante un tribunal, a fin de que éste decida
a la brevedad posible sobre la legalidad de su prisión y ordene su libertad si la prisión fuera
ilegal..”.

Consolidando un entendimiento lo suficientemente protectivo para toda persona destinada a


precautelar su libertad, la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH), en su art. 7.1
-concordante con el art. 25 antes señalado-, establece que “toda persona privada de libertad tiene
derecho a recurrir ante un juez o tribunal competente, a fin de que éste decida, sin demora, sobre
la legalidad de su arresto o detención y ordene su libertad si el arresto o la detención fueran
ilegales. En los estados partes cuyas leyes prevén que toda persona que se viera amenazada de
ser privada de su libertad tiene derecho a recurrir a un juez o tribunal competente a fin de que
éste decida sobre la legalidad de tal amenaza, dicho recurso no puede ser restringido ni abolido.
Los recursos podrán interponerse por sí o por otra persona”.

De lo expuesto se evidencia que la acción de libertad, con un fuerte influjo de la corriente


proteccionista emanada del sistema interamericano de protección de derechos humanos, se
configura en el Estado Plurinacional de Bolivia como una verdadera garantía constitucional para
el ciudadano y para la vigencia del Estado Social y Democrático de Derecho, encontrando esta
garantía, verdadero sustento en el art. 25 de la CADH y en todas las demás disposiciones que
forman parte del bloque de constitucionalidad citadas precedentemente, por tanto, en el marco
del Estado Social y Democrático de Derecho, como eje central de la estructura de este nuevo
modelo de Estado, corresponde establecer y precisar con claridad el “contenido esencial” de esta
garantía como medio idóneo de defensa de naturaleza procesal-constitucional, en tal sentido,
debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad, está diseñada sobre la base
de dos pilares esenciales a saber: El primero, referente a su naturaleza procesal y el segundo,
compuesto por los presupuestos de activación.

En el orden de ideas expuesto, corresponde desarrollar la primera nota fundamental que


configura el “contenido esencial” de esta garantía, es decir su naturaleza procesal, bajo esta
perspectiva, se establece que su esencia procesal, está estructurada al amparo de los principios
de sumariedad, celeridad, inmediación, informalismo y eficacia, postulados que pueden ser
inferidos del texto del art. 125 de la CPE, que garantizan una tutela judicial efectiva y un acceso
a la justicia constitucional, asegurando en definitiva el cumplimiento por parte del Estado
Plurinacional de Bolivia, del mandato inserto en el art. 25 de la CADH.

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el “contenido esencial” de esta garantía, está
configurado por sus presupuestos de activación, que de acuerdo a la ingeniería del art. 125 de la
CPE, son cuatro: a) los atentados contra el derecho a la vida; b) afectación del derecho a la
libertad; c) cualquier acto u omisión que constituya procesamiento indebido; y, d)
cualquier acto o omisión que implique persecución indebida. En mérito a lo expuesto, en el
caso de autos, será preciso abordar de manera específica el presupuesto referente al
procesamiento indebido a la luz del deber de motivación y valoración integral de los medios
probatorios en medidas cautelares, tarea que será desarrollada infra.

III.2. El deber de motivación y valoración integral de los medios probatorios en medidas


cautelares en el ámbito del procesamiento indebido

La motivación y también la valoración integral de medios probatorios aportados en una causa


jurisdiccional, constituyen presupuestos propios de las reglas de un debido proceso. En ese

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 314


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

orden, el Estado Social y Democrático de Derecho, solamente estará asegurado, en la medida en


la cual el ejercicio de la jurisdicción ordinaria, respete los postulados de un debido proceso y en
particular la motivación, fundamentación y valoración integral de medios probatorios aportados;
por tanto, estos aspectos inequívocamente se encuentran directamente vinculados con la
seguridad jurídica, que es concebida como un principio y también como un valor de rango
supremo, postulado a partir del cual, el Estado, en la medida en la cual asegure la certidumbre,
consolidará la paz social y cumplirá con este fin esencial plasmado en el art. 10 de la CPE.

Por lo expuesto, en un análisis de jurisprudencia al respecto, el entonces Tribunal


Constitucional, a través de la SC 0871/2010-R de 10 de agosto, estableció los requisitos para
asegurar el elemento motivación en las resoluciones jurisprudenciales y también la valoración
integral de la prueba aportada, exigencias entre las cuales se encuentran las siguientes: “a) Debe
determinar con claridad los hechos atribuidos a las partes procesales, b) Debe contener una
exposición clara de los aspectos fácticos pertinentes, c) Debe describir de manera expresa los
supuestos de hecho contenidos en la norma jurídica aplicable al caso concreto, d) Debe
describir de forma individualizada todos los medios de prueba aportados por las partes
procesales, e) Debe valorar de manera concreta y explícita todos y cada uno de los medios
probatorios producidos, asignándoles un valor probatorio específico a cada uno de ellos de
forma motivada, f) Debe determinar el nexo de causalidad entre las denuncias o pretensiones de
las partes procesales, el supuesto de hecho inserto en la norma aplicable, la valoración de las
pruebas aportadas y la sanción o consecuencia jurídica emergente de la determinación del nexo
de causalidad antes señalado”.

Los aspectos antes señalados, ya asumidos por la jurisprudencia precedente, deben ser aplicados
por la nueva jurisprudencia emanada del Tribunal Constitucional Plurinacional, por ser acordes
con el ejercicio pleno del control plural de constitucionalidad, en ese orden, y merced a este
entendimiento, se colige que los requisitos detallados supra, denotan la exigencia del
cumplimiento por parte de las autoridades jurisdiccionales de la motivación y constituyen
presupuestos esenciales de las reglas de un debido proceso, postulados, que en definitiva
asegurarán la vigencia del Estado Social y Democrático de Derecho y que en caso de ser
vulnerados, hacen viable la activación del control de constitucionalidad a través de la acción de
libertad en el marco del presupuesto del procesamiento indebido en causas procesales referentes
a medidas cautelares vinculadas con la libertad.

Asimismo, debe precisarse que la omisión valoratoria, en el marco de las reglas de un debido
proceso, implica la falta de consideración de alguno de los elementos probatorios producidos por
las partes en el decurso de la causa, aspecto que implica el incumplimiento del postulado en
virtud del cual, la autoridad jurisdiccional, debe considerar de manera integral todos los medios
de prueba aportados; por lo señalado, se concluye que el incumplimiento de este presupuesto, al
igual que el incumplimiento de la motivación de decisiones jurisdiccionales, activa el control
tutelar de constitucionalidad para la restitución del mismo en el marco del respeto al debido
proceso.

III.3. Análisis del caso de autos

En la especie, tal como ya se señaló, existen dos aspectos expresamente denunciados por el
ahora accionante: 1) La ausencia de motivación de la Resolución 04/2012 de 9 de enero; y,
2) La supuesta omisión en la valoración de los certificados médicos presentados por la
ahora accionante.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 315


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo señalado, en el caso de autos, el contenido de la Resolución 04/2012, debe


contrastarse con los requisitos para la motivación de resoluciones jurisdiccionales
establecidos en la ratio decidendi de la presente Sentencia; asimismo, en el caso concreto,
deberá analizarse la supuesta omisión valoratoria denunciada, tarea que será desarrollada a
continuación.

III.3.1. En cuanto a la exigencia de motivación

En el orden de ideas señalado, debe establecerse que el primer requisito para que una
sentencia se encuentre motivada, es la determinación con claridad y precisión de los hechos
atribuidos a las partes procesales; en ese orden, del contenido de la Resolución sometida a
control tutelar de constitucionalidad, se evidencia que el primer considerando de la misma, hace
referencia a los antecedentes de la causa (fs. 44 y vta.), por cuanto este primer aspecto se tiene
por cumplido.

Asimismo, con relación el segundo y tercer requisitos referidos a la descripción precisa de los
supuestos fácticos pertinentes y de los contenidos en la disposición o disposiciones a ser
aplicadas; cabe señalar que del contenido de la Resolución 04/2012, se establece que en la
fundamentación se invocan y describen los supuestos fácticos de los arts. 234 numerales 1, 4 y
10 y 235 del CPP; y se describen los supuestos fácticos de los arts. 124 y 298 del mentado
adjetivo, razón por la cual, se colige que se cumplió estas exigencias.

Debe precisarse también, que el cuarto requisito para el cumplimiento del presupuesto de
motivación, es el referente a la individualización y precisión de todos los medios de prueba
aportados por las partes; en ese orden, la Resolución 04/2012, establece las siguientes
declaraciones expresas: i) “…es decir el Juez ha tenido elementos suficientes para determinar la
solicitud presentada por el Señor Representante del Ministerio Público…”. Del contenido del
razonamiento precedente a esta afirmación, se evidencia que la Resolución ahora analizada, no
realiza una identificación, precisión o individualización de esos “elementos suficientes”
referidos; y, ii) El tercer considerando, de manera expresa señala: “Que, así vistos los
antecedentes para esta resolución este Tribunal compulsando los fundamentos expuestos por las
intervenciones orales como del Representante del Ministerio Púbico así como abogados de la
parte imputada, voto del vocal convocado, los certificados médicos presentados, y la revisión
del contenido de la resolución cuestionada. De esa compulsa y valoración de manera uniforme
se establece…” (sic) (resaltado nuestro) (fs. 46); por el contenido de esta cita textual y por el
contenido adicional de este considerando que no hace mención alguna a los elementos
probatorios antes citados, se establece que las autoridades jurisdiccionales no precisaron,
tampoco individualizaron los certificados médicos presentados y menos le otorgaron un valor a
los mismos, tal como manda la ratio decidendi desarrollada en el Fundamento Jurídico III.2 de
la presente Sentencia.

Asimismo, debe señalarse que otro requisito establecido en la ratio decidendi de la presente
Sentencia para que se cumpla con la exigencia de la motivación, versa, como ya se dijo, en la
valoración individualizada de todos los medios probatorios aportados; ahora bien, en la especie,
en relación a los citados certificados médicos, se debe precisar que los mismos no fueron
especificados por el Tribunal de alzada, dado que del contenido de la Resolución 04/2012, se
puede evidenciar que éstos se señalaron de manera general en la parte considerativa del fallo, sin
identificar las características que permitan colegir su existencia y presentación; refiriéndose
únicamente a “los certificados médicos”, sin detallar expresamente a cuales se refieren, por
cuanto, la Resolución objeto de control de constitucionalidad, no cumplió este otro requisito.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 316


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Finalmente, se tiene que la precisión y explicación del nexo de causalidad entre las denuncias o
pretensiones de las partes procesales, el supuesto de hecho inserto en la norma aplicable, la
valoración de las pruebas aportadas y la sanción o consecuencia jurídica pertinente y congruente
a la determinación del nexo de causalidad identificado, constituye otro requisito para que se
tenga por cumplida la exigencia de motivación. Este es un aspecto que refleja el principio de
congruencia en cualquier fallo emitido, y debe ser cumplido de manera disciplinada, a efectos de
que el procesado tenga el pleno convencimiento de que se falló en apego a la justicia, aplicando
las normas sustantivas y procesales vigentes y en respeto a los principios y valores supremos.
Consecuentemente, en el caso de análisis, pese a que, de manera general, en la citada
Resolución, se afirmó la existencia de los certificados médicos -lo que conlleva a suponer su
conocimiento por parte de las autoridades ahora demandadas-, sin embargo, en el cuerpo de la
propia Resolución, no se encuentra que se hubiera fundamentado sobre el valor que se otorgaron
a los mismos, ni explicado el motivo por el qué no eran relevantes o no incidieron en la
decisión; dicho de otro modo, las autoridades no explicaron el por qué, pese a la presentación de
los certificados médicos, determinaron revocar las medidas sustitutivas impuestas y disponer la
detención preventiva de la representada del accionante; por lo que este último requisito, tampoco
se tiene por cumplido.

III.3.2. En cuanto a la denuncia de omisión valoratoria

Tal como se dijo, la omisión valoratoria, al constituir un presupuesto del debido proceso, hace
viable la activación de la acción de libertad, cuando esta estuviere vinculada a la libertad, en ese
orden, deben resaltarse dos aspectos esenciales:

En primer lugar, la decisión impugnada; es decir, la Resolución 04/2012, revoca la Resolución


307/2011 de 6 de octubre y dispone la detención preventiva de la representada del accionante,
Martha Huanca Troche; por tanto, es evidente la vinculatoriedad entre este acto denunciado
como lesivo con la libertad, en ese contexto, en el caso concreto, existen además dos elementos
esenciales que deben ser analizados: a) La cita textual que se realiza en el tercer considerando en
el cual se señala haber compulsado los “certificados médicos presentados”; y, b) Que está
relacionado con el Auto de 10 de enero de 2012, mediante el cual, se responde a la solicitud de
complementación, aclaración y enmienda realizado por la parte accionante, esta providencia de
manera textual señala lo siguiente: “VISTOS: La solicitud realizada por la impetrante en
relación a que no se habría valorado el estado de salud de la misma, es necesario señalar que en
el Auto de Vista N° 24/2012 se ha tomado en cuenta tal aspecto ya que los Centros
Penitenciarios de la ciudad cuentan con médicos, así mismo los detenidos preventivos pueden
solicitar las respectivas salidas judiciales para la atención médica a los Juzgados de Ejecución
Penal competentes” (sic) (fs. 48).

En mérito a estos dos aspectos, se colige que en el caso de autos no existió omisión valoratoria,
puesto que los certificados médicos no fueron desconocidos por las autoridades ahora
demandadas, prueba de ello es que los mencionaron, aunque de manera general, tanto en la parte
considerativa de la Resolución impugnada, como en el Auto de 10 de enero de 2012; por lo
tanto, no podría afirmarse una omisión valoratoria, porque pese a que los conocieron; sin
embargo, no motivaron sobre el valor efectuado en los mismos.

Finalmente, debe señalarse que existe una estrecha vinculación entre la omisión valorativa de
prueba y la falta de motivación de resoluciones judiciales o administrativas, dado que la
valoración otorgada a los elementos probatorios se materializará a través de la fundamentación
del fallo; de modo tal, que la ausencia de uno, puede eventualmente arrastrar a la omisión del
otro, pero no en todos los casos, como en el presente, en el que de manera sutil se encuentra su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 317


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

diferenciación, puesto que, de un lado, se los consideró previo a emitir el fallo; sin embargo, a
continuación no se argumentó sobre el valor asignado a éstos, lo que vulnera de manera directa
al derecho de motivación como elemento constitutivo del debido proceso.

Por los fundamentos expuestos, se concluye que la Jueza de garantías, al haber concedido la
acción de libertad en cuanto a los dos actos denunciados como lesivos, evaluó parcialmente los
datos del proceso y las normas aplicables al mismo

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera en virtud a la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve:

1º APROBAR en parte, la Resolución 001/2012 de 13 de enero, cursante de fs. 78 a 82,


pronunciada por la Jueza Primera de Sentencia del Tribunal Departamental de La Paz; y en
consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada en cuanto a la falta de motivación denunciada;
y,

2º DENEGAR la tutela respecto a la omisión valoratoria denunciada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.


No interviene la Magistrada, Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez, por ser de voto disidente.

Fdo. Dr. Ruddy José Flores Monterrey.-Presidente.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

FUNDAMENTACION DE VOTO DISIDENTE


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag.: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Sentencia: 0049/2012
Acción de libertad
Expediente: 00020-2012-01-AL
Partes: Héctor Rogelio Gutiérrez Soliz en representación sin
mandato de Martha Huanca Troche contra Elías
Fernando Ganam Cortez y Ramiro López Guzmán,
Presidente de la Sala Penal Segunda y Presidente de la
Sala Penal Tercera, respectivamente, del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz
Departamento: La Paz

I. ANTECENDENTES

La suscrita Magistrada manifiesta su disconformidad con los fundamentos contenidos en la


Sentencia Constitucional Plurinacional (SCP) 0049/2012 de 26 de marzo, por lo que expreso voto
disidente en la aprobación de dicha Sentencia, en el plazo establecido expongo los fundamentos de
la disidencia bajo los siguientes argumentos jurídico-constitucionales:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 318
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. FUNDAMENTACION JURÍDICA DE LA DISIDENCIA

II.1. NECESARIA ACLARACIÓN DE LA DIFERENCIA ENTRE VOTO DISIDENTE Y


ACLARACIÓN DE VOTO

La disidencia de un magistrado a una decisión no solo representa un ejercicio legítimo a su libertad


de pensamiento y consiguientemente libertad de expresión, sino que resulta ser una de las
exteriorizaciones de la “pluralidad y pluralismo” que nuestra Constitución no solo reconoce, sino
gestiona.

En este contexto, es menester explicar que básicamente una aclaración de voto constituye un
desacuerdo de un magistrado respecto a un obiter dictum u obiter dicta contenidos en los
fundamentados jurídicos del fallo de una resolución, en este caso la o el magistrado discrepante
suscribirá la resolución; en cambio, un voto disidente implica un desacuerdo que incide y se
traduce en el decisum o decisión, o en una ratio decidendi o rationes decidendis, es decir de
presentarse una aclaración de voto sobre una ratio decidendi en una sala compuesta de dos
magistrados o magistradas, tendría la virtualidad de quitar la vinculatoriedad a la misma
trastrocándola en obiter dicta y en el caso de votos disidentes, la o el magistrado disidente se verá
impedido de suscribir la resolución constitucional y surgirá la obligación de efectuar su
fundamentación de forma separada, es decir, mientras que en el voto disidente se presenta un
desacuerdo en el resultado de la decisión asumida, el voto aclaratorio corresponde a un descuerdo
en el camino utilizado para llegar a la decisión.

En el presente caso, corresponde emitir un voto disidente en la medida en la que expreso mi


desacuerdo en el razonamiento principal -ratio decidendi- de la SCP 0049/2012 respecto a la falta
de motivación, y también en la decisión -decisum- por haberse llegado en mi criterio a un resultado
contradictorio.

II.2. ANÁLISIS DE LA SCP 0049/2012

En la SCP 0049/2012 en la parte que interesa al presente voto puede distinguirse:


En la relación de hechos que motivan la acción de libertad (Apartado I.1.1) se sostuvo que la
accionante manifestó a través de su representante haber sido sometida a una audiencia cautelar
dentro de un proceso penal, donde se le impuso medidas sustitutivas, pero en apelación se dispuso
su detención preventiva, sin considerar “…su grave estado de salud…”, ni valorar los certificados
médicos de 5 y 10 de Octubre de 2011 que presentó. Posteriormente (Fundamento Jurídico III.3)
se identificó dos temas procesales a resolver: “1) La ausencia de motivación de la Resolución
04/2012 de 9 de enero; y, 2) La supuesta omisión en la valoración de los certificados médicos
presentados por la ahora accionante” resolviéndose respecto a la falta de motivación alegada
(Fundamento Jurídico III.3.1) que en la resolución: “…las autoridades jurisdiccionales no
precisaron, tampoco individualizaron los certificados médicos presentados y menos le otorgaron un
valor a los mismos…”, además: “…en relación a los citados certificados médicos, se debe precisar
que los mismos no fueron especificados por el Tribunal de alzada… se puede evidenciar que éstos
se señalaron de manera general en la parte considerativa del fallo, sin identificar las características
que permitan colegir su existencia y presentación; refiriéndose únicamente a -los certificados
médicos-, sin detallar expresamente a cuales se refieren…“; y que: “…en el cuerpo de la propia
Resolución, no se encuentra que se hubiera fundamentado sobre el valor que se otorgaron a los
mismos, ni explicado el motivo por el que no eran relevantes o no incidieron en la decisión; dicho
de otro modo, las autoridades no explicaron el por qué, pese a la presentación de los certificados
médicos, determinaron revocar las medidas sustitutivas impuestas y disponer la detención
preventiva de la representada del accionante…” y respecto a la omisión valorativa (Fundamento

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 319


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Jurídico III.3.2), se sostuvo que: “…en el caso de autos no existió omisión valoratoria, siendo que
los certificados médicos no fueron desconocidos por las autoridades ahora demandadas, prueba de
ello es que los mencionaron, aunque de manera general, no solo en la parte considerativa de la
Resolución impugnada, sino también en el Auto de 10 de enero de 2012; por lo tanto, no podía
afirmarse una omisión valoratoria, porque pese a que los conocieron; sin embargo, no motivaron
sobre el valor efectuado en los mismos” argumentos que condujeron a conceder la tutela respecto a
la falta de motivación denunciada y a denegar la tutela respecto a la omisión valorativa.

II.3. DE LA DISIDENCIA

Mi disidencia a la SCP 0049/2012 puede resumirse en:

a) Falta de pronunciamiento expreso al derecho a la vida invocado por la parte accionante, tratado
en el Fundamento Jurídico de la disidencia II.3.1 del presente voto disidente.

b) Argumento contradictorio y diferenciación artificial poco clara o sutil entre omisión valorativa y
motivación de resoluciones judiciales en el Fundamento Jurídico de la disidencia II.3.2 del
presente voto disidente.

II.3.1. Ausencia de un enfoque dogmático en el análisis de la causa

La jurisprudencia sostiene que el derecho a la vida adquiere su fundamentalidad y carácter de


primario al constituirse en el presupuesto para el ejercicio del resto de derechos catalogados en el
texto constitucional, que “…obliga al Estado en dos sentidos: su respeto y su protección. La
autoridad estatal está constitucionalmente impedida de hacer cosa alguna que destruya o debilite
el contenido esencial de esos derechos y debiendo crear las condiciones indispensables para que
tengan cabal observancia y pleno cumplimiento…” (SC 411/00-R de 28 de abril) correspondiendo
otorgar tutela no solo a su lesión consumada en cuyo caso es irreparable sino a su amenaza esto
porque no es lógico esperar su lesión para dar por vulnerado el derecho a la vida.

La parte accionante invocó expresamente en su demanda de acción de libertad que la falta de


consideraciones a los certificados médicos presentados “…comprometen el DERECHO A LA
VIDA…” (la negrilla es añadida) pedido inequívoco si se considera la cita de varias SSCC
referidas al derecho a la vida, a pesar de ello la SCP 0049/2012 no lo identifica como parte del
objeto procesal y por ende no resuelve nada respecto a dicho derecho.

En este punto es necesario aclarar que las acciones de libertad no se rigen por el principio de
congruencia, así la SC 0887/2004-R de 8 de junio, sostuvo: “…si de la revisión de las actuaciones
de las autoridades recurridas el Tribunal Constitucional advierte actos ilegales que no han sido
demandados, pero que suprimen y atentan el derecho a la libertad del procesado, tiene plena
facultad para pronunciarse de oficio sobre los mismos…”, de manera que, cuando la parte
accionante deje de hacer referencia al derecho a la vida el Tribunal Constitucional Plurinacional
puede eventualmente considerar su lesión o amenaza, es decir, que este análisis puede efectuarse
sin que la parte accionante siquiera lo haya invocado a fortiriori, debió existir un pronunciamiento
expreso respecto al mismo.

El enfoque extrañado respecto al derecho a la vida, cuenta con importantes repercusiones prácticas
respecto a la intensidad del control de constitucional, está sobradamente demostrado que cuando el
derecho a la vida se encuentra en riesgo la fundamentación y análisis de todo Tribunal debe ser
estricta y además tiene importantes consecuencias en la decisión, pues en el caso de mantener la
detención preventiva debe provocar que el juez o tribunal exhorte a las autoridades penitenciarias a

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 320


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tomar las medidas sanitarias o médicas, para resguardar el derecho a la vida; sin embargo, debo
aclarar que el análisis extrañado no implica que necesariamente deba otorgarse tutela al derecho a
la vida, como en el presente caso, donde la condicionalidad y generalidad de los certificados
médicos impide otorgar la tutela jurídica respecto al derecho a la vida, en ese entendido dicho
análisis no debió obviarse.

II.3.2. Contradictoria diferenciación entre omisión valorativa y motivación de resoluciones


judiciales

La SCP 0049/2012 concede la tutela en lo referente a la falta de fundamentación, porque: “…las


autoridades jurisdiccionales no precisaron, tampoco individualizaron los certificados médicos
presentados y menos le otorgaron un valor a los mismos…”, y para que se cumpla la motivación
se requería: “…la valoración individualizada de todos los medios probatorios aportados… en
la especie, en relación a los… certificados médicos… no fueron especificados…, se puede
evidenciar que éstos se señalaron de manera general en la parte considerativa del fallo, sin
identificar las características que permitan colegir su existencia y presentación; refiriéndose
únicamente a -los certificados médicos-, sin detallar expresamente a cuales se refieren…”,
también “…en el cuerpo de la propia Resolución, no se encuentra que se hubiera fundamentado
sobre el valor que se otorgaron a los mismos, ni explicado el motivo por el qué no eran
relevantes o no incidieron en la decisión…”, pero luego se procede a denegar el cargo por
omisión valorativa alegándose que: “…no existió omisión valoratoria, puesto que los certificados
médicos no fueron desconocidos por las autoridades ahora demandadas, prueba de ello es que los
mencionaron, aunque de manera general, tanto en la parte considerativa de la Resolución
impugnada, como en el Auto de 10 de enero de 2012; por lo tanto, no podía afirmarse una omisión
valoratoria, porque pese a tener conocimiento de los mismos, no motivaron sobre el valor
efectuado en los mismos” (las negrillas son añadidas).

La fundamentación de las resoluciones constituyen un elemento del debido proceso e incluye la


valoración probatoria, en este sentido la SC 157/01-R de 19 de febrero, dentro de un proceso que
concedió la tutela por falta de fundamentación, estableció que: “…en todo fallo o sentencia se
deben indicar los elementos de convicción que dan lugar a la sanción que se impone al
condenado; es decir, cómo dichos elementos llegan a demostrar y establecer los hechos y la
responsabilidad que se atribuyen al autor”, es decir, una actividad implícita de la fundamentación
de resoluciones (género) es la valoración de la prueba (especie), por lo que encuentro innecesaria la
denegatoria en el por tanto -parte dispositiva y resolutiva del fallo-, respecto a la omisión
valorativa.

La diferenciación entre omisión valorativa (valoración general de elementos de convicción) y


motivación (mención individualizada de los elementos de convicción otorgándole el
correspondiente valor a cada uno) es contradictoria conforme puede extraerse de la simple lectura
de la ratio decidendi de la SCP 0049/2012 de forma que la excesiva disquisición teórica crea una
zona de penumbra entre valoración parcial y total.

III. CONCLUSIONES

Por las razones expuestas, la suscrita Magistrada considera que el iter lógico seguido en el análisis
de la problemática no fue el adecuado, por las siguientes razones:

1) Debió analizarse la supuesta amenaza al derecho a la vida, como expresamente solicitó la


parte accionante, pero denegándose esta solicitud de tutela, basándose en el análisis de los
certificados médicos -genéricos e hipotéticos en la temática- no puede concluirse en una amenaza

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 321


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

inminente al derecho a la vida, sino al derecho a la salud por hacer referencia a un tratamiento
médico, que de acuerdo al análisis del caso concreto impele también a los jueces ordinarios a
adoptar las medidas pertinentes para su resguardo, aspectos que debieron tratarse.

2) Respecto a la falta de motivación, la concesión de la tutela debió justificarse en razón a que los
certificados médicos solo fueron mencionados en la resolución impugnada, pero no fueron
valorados, por ende existe omisión valoratoria, sin que pueda alegarse que el decreto de
complementación pueda subsanar en este caso la ausencia de valoración máxime; porque la
resolución principal está suscrita por dos vocales y la complementación solamente por uno de
ellos, desconociendo la conformación colegiada del tribunal de apelación, en este marco la
diferenciación entre omisión valorativa y la motivación de resoluciones judiciales en el contexto
de la SC 0049/2012 resulta contradictoria, por lo que únicamente correspondía conceder la tutela
respecto a la falta de motivación invocada, al encontrarse la omisión valorativa implícita en la
misma.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 322


AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS
SALAS: PRIMERA ESPECIALIZADA, SEGUNDA,
TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

323
324
Autos de Enmienda, Complementación y Ampliación
(ECA)

325
326
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL ENMIENDA, COMPLEMENTACIÓN Y AMPLIACIÓN

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

AUTO CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 001/2012-ECA


Sucre, 19 de marzo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00049-2012-01-AL
00061-2012-01-AL (acumulado)
Departamento: Oruro

La aclaración de oficio dentro de la acción de libertad, presentada por Rosario Quispe Bustamante en
representación sin mandato de Erika Rodríguez Velázquez contra Máximo Rosendo Gutiérrez
Rojas, Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, Beatriz Cortez Vásquez y Virginia Colque Calle,
Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro; y dentro de la
acción de libertad, interpuesta por Rosario Quispe Bustamante en representación sin mandato de
Rossio Aquino Rodríguez contra Beatriz Cortez Vásquez y Virginia Colque Calle, Vocales del
mismo Tribunal Departamental de Justicia.

I. DE LA ACLARACION

La aclaración, se encuentra estipulada en el art. 45 de la Ley del Tribunal Constitucional


Plurinacional (LTCP), ha sido instituida para que este Tribunal de oficio o a petición de parte,
dentro de las veinticuatro horas siguientes a la notificación de la resolución, pueda aclarar,
enmendar o complementar algún concepto obscuro, corregir un error material o subsanar alguna
omisión que no afecte el fondo de la decisión asumida y expresada en el fallo.

En ese entendido, se tiene los expedientes signados con los números 00049-2012-01-AL y 00061-2012-
01-AL, que fueron acumulados mediante AC 0015/2012-CA/S de 5 de marzo y habiéndose efectuado
posteriormente una nueva codificación, corresponde a este Tribunal aclarar que la Sentencia
Constitucional Plurinacional 0014/2012 de 16 de marzo, hace referencia a la actual codificación de los
mismos, es decir que el expediente 2012-25064-02- AL corresponde al número 00049-2012-01-AL y el
expediente 2012-25083-02-AL corresponde al número 00061-2012-01-AL.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en virtud de la jurisdicción y competencia que le confieren los


arts. 12.7 de la Constitución Política del Estado Plurinacional y 45 de la LTCP, resuelve ACLARAR de
oficio la SCP 0014/2012 de 16 de marzo.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 327


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL ENMIENDA, COMPLEMENTACIÓN Y AMPLIACIÓN

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

AUTO CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0002/2012-ECA


Sucre, 30 de marzo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra.Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00018/2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En la enmienda, complementación y aclaración de oficio, dentro de la acción de amparo


constitucional interpuesta por Severo Carvajal Gutiérrez; Nicanor Subia Llanos; Santiago Subia
Llanos; René Subia Llanos; Braulio Subia Avendaño; Sandalio Tolaba Ramírez; y, Dionicio
Tolaba Ramírez contra Fatho Yamil Santiago Salame, Juez de Instrucción Cautelar Mixto de
Incahuasi; y Daniel Tejerina, Oficial de Diligencias de dicho despacho

I. DE LA ENMIENDA

La enmienda estipulada en el art. 45 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional


(LTCP); ha sido instituida como un medio que tienen tanto el accionante como el demandado,
para pedir que el Tribunal Constitucional Plurinacional corrija errores materiales entre otros.
Asimismo, en base a las mismas normas este Tribunal también tiene facultad para corregir de
oficio dichos errores en caso de constatarse en forma posterior a la emisión de la sentencia, lo
que significa, que no es un medio para que se cambie la decisión de fondo, indicando el señalado
artículo.

“El Tribunal Constitucional Plurinacional, de oficio o a petición de parte, dentro de las


veinticuatro horas siguientes a la notificación de la resolución, podrá aclarar, enmendar o
complementar algún concepto obscuro, corregir un error material o subsanar alguna omisión sin
afectar el fondo de la resolución. La resolución será emitida mediante Auto Constitucional en el
plazo de veinticuatro horas desde que asuma conocimiento”.

Revisado el expediente 00018-2012-01-AAC, al mismo que se le asignó el número de Sentencia


Constitucional Plurinacional “0018/2012” de 16 de marzo, y toda vez que este Tribunal ha
detectado un error material en el número de Resolución asignado, pues erróneamente le fue
consignado el número 0018, siendo el número correcto el 0010; consiguientemente, este
Tribunal de oficio procede a la enmienda del citado error.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, de conformidad con los arts. 196. I y 202.6 de la


Constitución Política del Estado (CPE); y 2, 12.7, y 45 de la LTCP; resuelve ENMENDAR de
oficio el expediente 00018-2012-01-AAC, signado con el número de Sentencia Constitucional
Plurinacional 0018/2012 de 16 de marzo, y en definitiva le corresponderá el número 0010/2012.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chanez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 328
RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS
POR LA SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA

329
330
CONTROL DE
CONSTITUCIONALIDAD
TUTELAR

331
332
Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de
Acciones de Defensa

333
334
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0043/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar
Acción de libertad
Expediente: 2009-19248-39-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 90/2011 de 30 de agosto, cursante a fs. 88 y vta., pronunciada dentro


de la acción de libertad, interpuesta por Ismael Muñoz Pinto y Enrique Delgadillo Curváis
contra Teodomiro Saavedra Quiroz y Cristina Rodríguez Zegarra, Jueces Técnicos del
Tribunal Cuarto de Sentencia de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz-.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 9 de febrero de 2009, cursante de fs. 16 a 18, los accionantes
alegan lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Se encuentran detenidos preventivamente en el Penal de San Pedro, desde hace tres años y siete
meses, circunstancia que vulnera el derecho a un proceso sin dilaciones indebidas, considerando
que la prisión provisional tiene la finalidad de asegurar la presencia del encausado en las
actuaciones del proceso penal, pero no puede prolongarse más allá de los límites establecidos
por ley, caso contrario se trata de una condena anticipada que atenta contra la garantía de la
presunción de inocencia; sin embargo, su libertad se encuentra condicionada a una fianza de
imposible cumplimiento como es la suma de Bs100 000.- (cien mil bolivianos 00/100).

Asimismo, manifiestan que las autoridades demandadas desconocieron esa situación cuando
solicitaron la cesación de su detención preventiva, cumpliendo con la presentación de certificado
de trabajo, domicilio, familia y acreditaciones bancarias y de derechos reales, demostrando la
inexistencia de patrimonio, pues al ser habitantes del área rural no tienen dicha suma, siendo
ilegal su detención, dado que no se dio el impulso procesal para que el proceso se desarrolle
dentro de los plazos previstos por ley y se dicte sentencia.

Finalmente indica que no modificaron de oficio, la medida cautelar de imposible cumplimiento,


conforme dispone el art. 250 del Código de Procedimiento Penal (CPP), y no obstante de
ponerlos en conocimiento de ese extremo, no resolvieron su solicitud, omisión ilegal que se
agrava con el tiempo de duración máxima prevista por el art. 133 del CPP.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes consideran lesionados sus derechos a la libertad y a un proceso sin dilaciones
indebidas, citando al efecto los arts. 115 de la Constitución Política del Estado (CPE), 8 de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 335
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Convención Americana sobre Derechos Humanos y 14 del Pacto Internacional de Derechos


Civiles y Políticos.

I.1.3. Petitorio

Solicitan se declare “procedente” la acción de libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 30 de agosto de 2011, según consta en el acta cursante a fs. 87
y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Los accionantes no se hicieron presentes en la audiencia, pese a su legal notificación (fs. 84


vta.).

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Las autoridades demandadas, no se presentaron en la audiencia siendo que fueron notificadas


(fs. 84).

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Tercera constituida en Tribunal de garantías, mediante Resolución 90/2011 de 30


de agosto, cursante a fs. 88 y vta., denegó la acción de libertad; argumentado, que en el presente
caso, no se cumplió “con el principio de subsidiariedad, establecidas en las SSCC 0160/2005-R
y la 930/2010-R, entre otras, que establecieron que estos recursos necesariamente deben ser
agotados antes de interponer la Acción de Libertad” (sic).

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de
23 de diciembre de 2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la
Sala Liquidadora Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de
2012, a objeto de la Liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de
garantías hasta el 31 de diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998.
Con la referida competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución
dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis del expediente y de la prueba aportada, se concluye lo siguiente:

II.1. Dentro del proceso penal seguido en contra de los accionantes y otros, por la presunta
comisión de los delitos de asesinato, secuestro, privación de libertad, torturas y otros, el Tribunal
Tercero de Sentencia que mediante Resolución 51 de 24 de mayo de 2007, dispuso la cesación
de su detención preventiva en aplicación de lo previsto en el art. 239.1) del CPP, bajo la
aplicación de las siguientes medidas sustitutivas: a) Arraigo de los imputados, b) Prohibición de
concurrir a lugares de expendio de bebidas y otros lugares que constituyan medios para cometer
actos delictivos; c) Fianza económica de Bs100 000 (cien mil bolivianos 00/100), para cada uno
de los imputados; y, d) Prohibición de comunicarse con personas que estuviesen implicadas en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 336
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

la comisión del hecho (fs. 6 a 13); dicho fallo fue confirmado en apelación por Resolución
305/08 de 16 de abril de 2008, pronunciado por la Sala Penal Primera (fs. 41 a 42 vta.).

II.2. Por memorial presentado el 2 de febrero de 2009, los accionantes solicitaron la


modificación de la medida cautelar, alegando haberse fijado una fianza económica de imposible
cumplimiento (fs. 43); solicitud que fue respondida, mediante providencia de 4 del mismo mes
y año, por Teodomiro Saavedra Quiroz, Presidente del Tribunal Cuarto de Sentencia, quien
dispuso la consideración de la solicitud de los accionantes en la audiencia de juicio oral a
realizarse el 13 de igual mes y año (fs. 44). Contra dicha resolución, por memorial de 5 de
ese mes y año, los accionantes presentaron recurso de reposición (fs. 45 a 46).

II.3. Por decreto de 9 de febrero de 2009, las autoridades demandadas, repusieron la


providencia del 4 de ese mes y año, fijando audiencia de consideración de la solicitud de
modificación de la medida cautelar para el 11 del mismo mes y año, disponiendo se
convoque a los jueces ciudadanos (fs. 47).

II.4. El 9 de febrero de 2009 a horas 17:05 los accionantes interpusieron la presente acción
de libertad (fs. 16 a 18), cuya audiencia de consideración se fijó para el 10 de febrero de
2009 a horas 15:30 (fs. 19), siendo notificadas las autoridades demandadas con dicho
señalamiento el 9 de febrero de 2009 a horas 17:45 (fs. 20).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan la vulneración de sus derechos a la libertad y a un proceso sin dilaciones
indebidas; por cuanto, las autoridades demandadas no modificaron de oficio la medida cautelar
de fianza económica impuesta, que a su criterio sería de imposible cumplimiento y tampoco
resolvieron la solicitud de modificación de la citada medida cautelar. En consecuencia,
corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a los fines de conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. En cuanto a la modificación de la medida cautelar de la fianza económica

De acuerdo a la doctrina constitucional, establecida en la SC 1227/2004-R de 2 de agosto y que


fue aplicada en la SC 0161/2010-R de 17 de mayo, con referencia a la fijación del monto de la
fianza, se razonó que el juzgador no está obligado a fijarla en el monto que solicite el procesado
o imputado, sólo porque éste no tenga un bien a su nombre, pues deben presentarse otros
elementos probatorios, para demostrar de manera objetiva, el imputado vive en un estado de
pobreza, lo cual no le permitió cumplir la mencionada medida, por ende corresponde al
imputado, presentar los elementos de juicio y evidencias que permitan al juez o tribunal tener
información clara sobre su situación patrimonial, pues no puede esperarse que la autoridad
judicial presuma que el imputado tiene una situación económica precaria.

En ese sentido, de acuerdo al razonamiento expuesto, se colige que en el presente caso, las
autoridades demandadas, no podrían modificar de oficio la medida cautelar de fianza
económica; toda vez, que debía ser a solicitud del accionante y éste debe demostrar el estado de
pobreza que justifique la modificación de la medida sustitutiva de fianza de imposible
cumplimiento; en consecuencia no corresponde conceder la tutela solicitada en este punto.

III.2. El principio de celeridad en la tramitación de solicitudes vinculadas al derecho a la


libertad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 337


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

De acuerdo a lo establecido en el art. 125 de la CPE, la acción de libertad, es una acción


jurisdiccional de defensa a favor de: “Toda persona que considere que su vida está en peligro,
que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal…”; a efectos que: “…se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”; habiéndose
ampliado en la Constitución vigente, su ámbito de protección al derecho a la vida y a actos
provenientes de particulares; tutelando por ende, los derechos a la vida, a la libertad física o
personal; y asimismo, a la libertad de locomoción y al debido proceso, cuando éstos últimos
estén vinculados imprescindiblemente al derecho a la libertad física; de igual formal este
derecho es considerado como un derecho fundamental previsto y protegido por el art. 23.I de la
CPE que establece que toda persona tiene derecho a la libertad personal que sólo podrá ser
restringida en los límites señalados por la ley, para asegurar el descubrimiento de la verdad
histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales, por su parte el parágrafo III del
referido precepto constitucional, dispone que nadie será detenido, aprehendido o privado de su
libertad, salvo en los casos y según las formas establecidas por la ley.

Con referencia a la garantía del debido proceso sin dilaciones indebidas la Constitución, en su
art. 115 expresa que: “I. Toda persona será protegida oportuna y efectivamente por los jueces y
tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos. II. El Estado garantiza el derecho
al debido proceso, a la defensa y a una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y
sin dilaciones” y complementando el art. 180.I, menciona los principios procesales en los que se
fundamenta la jurisdicción ordinaria, entre los cuales se encuentran la celeridad y la inmediatez.

Asimismo en cuanto a la celeridad procesal vinculada al derecho a la libertad, es preciso


mencionar a la SC 990/2010-R de 10 de agosto, donde se aplicó el razonamiento comprendido
en la SC 0224/2004 de 16 de febrero - al no ser contradictorio con la Constitución Política del
Estado vigente -alegando que toda autoridad que conozca de una solicitud en la cual se
encuentra involucrado el derecho a la libertad física, tiene la obligación de tramitarla con la
mayor celeridad posible, o por lo menos dentro de los plazos razonables, y de no hacerlo podría
provocar una restricción indebida del citado derecho, por ello, no se debe entender, que siempre
tendrá que otorgar o dar curso a la solicitud en forma positiva, de esto dependerá las
circunstancias y pruebas que se aporten en cada caso, dado como se reitera la lesión del derecho
a la libertad física, está en la demora o dilación indebida de una solicitud de tal naturaleza; es
decir, que si la solicitud es negada de acuerdo a una compulsa conforme a Ley, no es ilegal
siempre y cuando esa negativa se la resuelva con la celeridad que exige la solicitud, en
consecuencia se colige, el principio de celeridad procesal, impone a quienes imparten justicia,
sustanciar los asuntos sometidos a su conocimiento, sin dilaciones indebidas.

Ahora bien, concretamente, en cuanto a la tramitación de las solicitudes de cesación de la


detención preventiva, la SC 0078/2010-R de 3 de mayo, razonó indicando que la “detención
preventiva, no tiene por finalidad la condena prematura, por cuanto la presunción de inocencia,
sólo es desvirtuada ante un fallo condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su
imposición como medida precautoria está sujeta a reglas, como también su cesación, lo cual
implica el trámite a seguir; y si bien no existe una norma procesal legal que expresamente
disponga un plazo máximo en el cual debe realizarse la audiencia de consideración,
corresponde aplicar los valores y principios constitucionales, previstos en el art. 8.II de la CPE,
referido al valor libertad complementado por el art. 180.I de la indicada norma constitucional,
que establece que la jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad
entre otros; en consecuencia, toda autoridad jurisdiccional que conozca una solicitud de un
detenido o privado de libertad, debe tramitar la misma, con la mayor celeridad posible, y dentro
de los plazos legales, si están fijados, y en un plazo razonable, si no está establecido por ley y si
no fuese así, tal actuación procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 338
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

detenido y en consecuencia repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por
la sola privación de libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que
necesariamente se deba deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado
oportunamente a fin de que obtenga una respuesta positiva o negativa”.

Además la mencionada Sentencia Constitucional, expresó se deba entender que un acto dilatorio
en el trámite de la cesación de la detención preventiva; cuando en el lugar de fijar directamente
la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, se dispongan traslados previos e
innecesarios no previstos por ley; asimismo, se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá
de lo razonable o prudencial. Plazo que puede ser en un límite de tres o cinco días máximo,
dependiendo de la particularidad de cada caso; y, finalmente se le suspende la audiencia de
consideración, por causas o motivos que no justifican la suspensión, ni son causales de nulidad.
Tal el caso de la inasistencia del representante del Ministerio Público o de la víctima y/o
querellante, si es que han sido notificadas legalmente y no comparecen a la audiencia.

III.3. Análisis del caso concreto

En el presente caso, se evidencia, que dentro del proceso penal seguido en contra de los
accionantes, mediante Resolución de 24 de mayo de 2007, se dispuso la cesación de su
detención preventiva, bajo la aplicación de medidas sustitutivas; dicho fallo que fue confirmado
en apelación por Resolución 305/08 de 16 de abril de 2008; posteriormente, el 2 de febrero de
2009, los accionantes solicitaron la modificación de la medida cautelar, indicando haberse fijado
una fianza económica de imposible cumplimiento, respondiéndoseles, mediante providencia de
4 del mismo mes y año, por el Presidente del Tribunal Cuarto de Sentencia, quien dispuso
la consideración de la solicitud de los accionantes en la audiencia de juicio oral el 13 de
igual mes y año; ante esta providencia, los accionantes, presentaron recurso de reposición el
5 de ese mes y año y al no recibir respuesta alguna a su solicitud, el 9 de referido mes y
año, interpusieron la presente acción.

En consecuencia, de lo precedentemente alegado, se colige que las autoridades demandadas, al


no dar respuesta de manera inmediata y oportuna a la solicitud de reposición, formulada por los
accionantes, dentro de las veinticuatro horas, previstas por el art. 402 del CPP, y; al haber
dispuesto mediante proveído de 4 de febrero de 2009, que conocerían recién el 13 del referido
mes y año - luego de 7 días - la modificación de la medida cautelar formulada por los imputados,
sin ninguna justificación ni fundamentación, cometieron un acto dilatorio, dentro del proceso
penal seguido en contra de los accionantes; por cuanto, no tramitaron la misma con la celeridad
correspondiente, ni dentro de los plazos legales, peor aún en un plazo razonable, previsto en la
jurisprudencia de tres a cinco días, situación que repercute en la libertad de los imputados ahora
accionantes, de conformidad al razonamiento desarrollado en el fundamento jurídico III.1. y lo
previsto en los arts. 115.II y 180.I de la CPE, vulnerando el derecho a la libertad de los
imputados o procesados.

Por otra parte, es menester indicar que si bien consta en obrados el decreto de 9 de febrero
de 2009, mediante el cual, las autoridades demandadas, repusieron la providencia del 4 de
ese mes y año, fijando audiencia de consideración de la solicitud de modificación de la
medida cautelar para el 11 del mismo mes y año; empero, no existe constancia de que los
accionantes hubiesen sido notificados con el referido proveído; por lo que éstos presentaron
la acción tutelar en la misma fecha 9 de febrero y las autoridades demandadas fueron
notificadas con la presente acción de igual forma en la señalada fecha.

Por los motivos expresados, concierne otorgar la tutela pedida a través de la presente acción de
libertad; empero, la concesión de la misma no importa otorgar la libertad a los accionantes, sino
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 339
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

simplemente que se dé curso a la reposición solicitada y en audiencia de consideración de


modificación de las medidas cautelares, se evalúe y determine la pertinencia o no de modificar
la medida existente contra los accionantes; finalmente, se llama la atención a las autoridades
demandadas, al ser evidente que existió dilación indebida por las mismas, para resolver la
solicitud de modificación de las medidas cautelares, formulado por los accionantes; por ende, se
recomienda que a futuro, en casos análogos, actúen con la debida celeridad que corresponda.

De igual forma se llama la atención al Tribunal de garantías, por no haber realizado una debida
fundamentación, en la Resolución que resuelve la acción de libertad, toda vez que su obligación
es fundamentar sus resoluciones.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber denegado la acción tutelar, no ha actuado


correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR en parte la Resolución 90/2011 de 30 de agosto, cursante a fs. 88 y vta.,
pronunciada por la Sala Penal Tercera de la Corte Superior del Distrito Judicial de La Paz -ahora
Tribunal Departamental de Justicia-, en consecuencia CONCEDER la tutela solicitada,
solamente en cuanto a la dilación indebida de las autoridades demandadas, para resolver
la solicitud de modificación de fianza económica.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortéz Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar.-Magistrada .
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0044/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA LIQUIDADORA
Mag. Relatora: Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20692-42-AAC
Distrito: Santa Cruz

En revisión la Resolución 45/2009 de 6 de octubre, cursante de fs. 129 a 130, pronunciada,


dentro la acción de amparo constitucional interpuesta por María Isabel Castedo Vaca Diez,
Ovidio Vaca Diez Jiménez, Elías Daher Salame, Mauricio Joaquín Pessoa Rivero contra
Juan Carlos Burgos Camargo, Gloria Ercilia Justiniano Saavedra, María Saucedo
Machuca, Marina Masaby Vargas, Adalberto Rodríguez Flores, Moicés Medrano
Justiniano, Claudia Cecilia Justiniano Saavedra, Martha Roca Fernández, Vanesa
Giobana Justiniano Roca, Gladis Roca Fernández, Luber Gomez, Sandra Scarlet Umalla
de Glatt, Richar Salvatierra Lozada, Gabriel Paredes Cuota, Roberto Tito Moya, Josefina
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 340
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Pasabaré Gómez, Jesús Rider Justiniano Zerda, Mariluz Vargas, Carlos Antelo Antelo,
Cristóbal Salazar Justiniano, Tania Sanguino Rodríguez, Mirka Padilla Michel.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Los accionantes por memorial presentado el 11 de septiembre de 2009, cursante de fs. 12 a 14,
señalan lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 15 de marzo de 2009, los demandados junto a otras personas más invadieron de forma
violenta los terrenos de su propiedad que se encuentran ubicados en el “km 5 y medio de la
carretera norte” a Montero, unidad vecinal “ET 52” manzano 3, utilizando machetes, palos y
otros objetos cortantes, desalojando a todas las personas con las que habían suscrito contrato
preliminar de compra-venta, cumpliendo con todos los requisitos de forma.

Refieren que, enterados de los hechos delictivos se apersonaron a sus predios, donde pudieron
evidenciar que aprovechando la oscuridad de la noche hurtaron postes, machones y el
alambrado, que fueron utilizados para la división de otros lotes que también fueron invadidos;
momento en el que les habrían exhibido los títulos de propiedad, pidiéndoles se retiren del
predio; sin embargo, fueron agredidos física y verbalmente y recibiendo amenazas de muerte.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Los accionantes señalan la vulneración de sus derechos a la propiedad privada, sin citar norma
constitucional que lo contenga.

En audiencia, citan el art. 56 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan la “restitución de sus derechos a la propiedad, otorgándoseles la inmediata restitución


de la posesión de sus lotes” y sea con la colaboración de la fuerza pública.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 6 de octubre de 2009, según consta en el acta cursante de fs.
126 a 129 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

Los accionantes, por intermedio de su abogado ratificaron lo expresado en el memorial de


demanda, y ampliando señaló: a) A finales de diciembre de 2008, fueron invadidos por
avasalladores, los terrenos que se encuentran en el “Km 5 y medio de la carretera norte” que
conduce a Montero; sin embargo, se llego a un acuerdo transaccional con aquellas personas,
suscribiendo un contrato de compra-venta preliminar con ciertas condiciones, entre las que
figuraba un compromiso de efectuar un proyecto de urbanización y asi poder ingresar al terreno,
con esa limitación, se efectúa el reconocimiento el 15 de enero de 2009; b) Posteriormente a esa
situación, un número de cuatrocientas o quinientas personas ingresaron a los terrenos de
propiedad del Banco Sur S.A. en liquidación, que son colindantes con los terrenos de propiedad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 341
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de sus defendidos y están fusionados físicamente, pretendiendo entrar a los terrenos de los ahora
accionantes, desalojando parcialmente, hasta que el 15 de marzo lograron consolidar el
avasallamiento y despojar a los propietarios con quienes se había firmado un contrato de
compra-venta preliminar; c) Cuando los avasalladores ingresaron a dichos terrenos, estos se
encontraban totalmente alambrados; sin embargo, los postes fueron retirados y quemados, los
propietarios, no podían ingresar al terreno porque los invasores se encontraban armados con
machetes; y, d) Ante esa situación y al evidenciarse la vulneración del derecho a la propiedad,
interponen la presente acción amparados en el art. 56 de la CPE, solicitando sean desalojadas del
terreno y que no hagan innovaciones.

Con el derecho a la replica, señaló que tiene que efectuarse un saneamiento, y además aclaró que
los terrenos se encuentran en jurisdicción municipal, por lo que no se requiere de titulo agrario.

En cuanto al interdicto de retener la posesión alegado por los demandados, señalaron que es otro
proceso mal planteado, toda vez que, ellos no estaban en posesión, y lo que hicieron fue atacar a
los propietarios a la fuerza, despojándolos del lugar, pese a que tenían toda la potestad para
cuidar del terreno.

I.2.2. Informe de las personas demandadas

Mediante informe escrito cursante de fs. 124 a 125 vta., los demandados señalaron: 1) Estar en
posesión quieta y pacifica desde hace un año atrás conforme el art. 602 del Código de
Procedimiento Civil (CPC); 2) Los accionantes indican ser propietarios de la unidad vecinal “ET
52”, manzano 3, y ellos no encontrarse en posesión de los mismos, por lo que todas las
citaciones para la presente acción tutelar son nulas de pleno derecho; 3) Adjuntaron plano con
proyecto de urbanización aprobado, donde se indica la ubicación exacta como ser “U.V.333-A
manzana 5 y 5-A” con una superficie de 9 215 m2, mientras que la “ET 52” se encuentra distante
a dos unidades a lado derecho; y, 4) Solicitan la improcedencia, por oscuridad, incompetencia y
falsos argumentos alejados de la verdad histórica de los hechos.

En audiencia el abogado de los demandados, aclaró representar solamente a Gladis Roca y Rosa
Flores, y ratificó el informe escrito leído en audiencia, además adjuntó una copia del proceso
interdicto de retener la posesión, proceso que es de conocimiento de los juzgados de instrucción
civil.

Con el derecho a la dúplica, señaló como prueba preconstituida los mismos títulos de propiedad
presentados por los accionantes; indicando que son títulos agrarios y no así de áreas urbanizadas.

I.2.3.Resolución

La Sala Civil Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Santa Cruz, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución
45/2009, cursante de fs. 129 a 130, por la que concede la acción tutelar, sobre los predios que
ocupan, otorgándoles el plazo de cuarenta y ocho horas a partir de ese momento para que
devuelvan a sus propietarios los terrenos que ocupan bajo prevención de librarse mandamiento
de desapoderamiento y el uso de la fuerza pública. Con el siguiente argumento: i) Los
accionantes dieron cumplimiento a dos requisitos, acreditando el derecho de propiedad; y que en
el momento de la interposición de la presente acción tutelar no se encontraba en uso, goce de los
terrenos de propiedad; ii) Además del informe presentado por el Oficial de Diligencias, en el que
señaló que acompañado de otra persona, se constituyó en el domicilio de los demandados para
practicar las notificaciones, siendo agredidos, lo que demuestra que los terrenos avasallados se
encuentran dentro de la propiedad de los accionantes.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 342
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011, la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes se establecen las conclusiones que se


señalan seguidamente:

II.1. Los accionantes alegan que el 15 de marzo de 2009, los demandados acompañados de un
grupo de personas, invadieron de forma violenta los terrenos de su propiedad que se encuentran
ubicados en el “Km 5 y medio de la carretera norte” utilizando machetes, palos y otros objetos
cortantes, desalojando a todas las personas que se encontraban en posesión de los mismos (fs. 12
vta.).

II.2. De fs. 4 a 8, cursan inscripciones en Derechos Reales (DD.RR.) bajo matricula


computarizada acreditando el derecho propietario sobre el bien inmueble objeto de la presente
acción a nombre de María Isabel Castedo Vaca Diez, Ovidio Vaca Diez Jiménez, Mauricio
Joaquín Pessoa Rivero y de Elías Daher Salame.

II.3. El Oficial de Diligencias de la Sala Civil Primera, constituida en Tribunal de garantías,


mediante informe escrito de 6 de octubre de 2009, comunicó a dichas autoridades que el 2 del
citado mes y año, se constituyó en el domicilio de los demandados, a fin de practicar la
notificación con la acción de amparo constitucional, acompañado de Edgar Enzo La Fuente
Rodríguez, quien fue agredido físicamente por los ahora demandados, razón por la cual tuvieron
que huir del lugar, pues incluso cuando se encontraba dentro de la movilidad lo seguían
pateando (fs. 91).

II.4. De fs. 38 a 89, cursa contrato preliminar de compraventa de lotes de terreno suscrito entre
los copropietarios y vendedores, ahora accionantes y los futuros compradores Mariana Carolina
Sánchez Salvatierra, Edgar Edson La Fuente Rodríguez, María Limbania La Fuente Rodríguez,
Almeida Matilde Campero Guzmán, por sí y en representación de José Torrico Garvizu, Luz
Mila Dorado Rodríguez, Franco Rivero Bacotich, Natalia Antelo Gonzales y Roberto Tito
Moya, con el respectivo reconocimiento de firmas.

II.5. A fs. 30, cursa demanda de interdicto de retener la posesión dirigida contra los ahora
accionantes, de 6 de marzo de 2009.

II.6. Mediante memorial de 22 de abril de 2009, los accionantes interponen querella contra los
avasalladores ahora demandados (fs. 109 a 110).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes denuncian la vulneración del derecho de propiedad, por cuanto un grupo de
personas invadió sus terrenos ubicados en el “km 5 y medio de la carretera al norte”,
desalojando violentamente a los detentadores, con quienes se habría firmado un contrato de
compra-venta preliminar con condiciones, situación que les facultaba cuidar dichos terrenos. En
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 343
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

consecuencia, corresponde analizar en revisión si tales extremos son evidentes a fin de conceder
o denegar la tutela impetrada.

III.1. La acción de amparo constitucional y el alcance frente a medidas de hecho

La acción de amparo constitucional, ha sido instituida por el art. 128 de la CPE, y se rige por los
principios de inmediatez y subsidiariedad, de acuerdo a la configuración prevista en el art. 129.I
cuando establece que se podrá interponer esta acción tutelar: “…siempre que no exista otro
medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados…"; es decir, que la protección que brinda, esta vinculada siempre a la
inexistencia de otro recurso o vía legal para la tutela de los derechos que se estiman lesionados;
sin embargo, a través de la jurisprudencia constitucional, se ha establecido la procedencia
excepcional, prescindiéndose de su naturaleza subsidiaria, en los casos que se advierta la
existencia de una lesión evidente al derecho o se haya ocasionado daño irreparable, proveniente
de medidas de hecho cometidas por autoridades publicas o por personas particulares, situación
que merece una protección inmediata porque de lo contrario la misma resultaría ineficaz.

Sobre el particular, se establece que las acciones o medidas de hecho, constituyen: ”…'los actos
ilegales arbitrarios que desconocen y prescinden de las instancias legales y procedimientos que
el ordenamiento jurídico brinda, realizando justicia directa, con abuso del poder que detentan
frente al agraviado, actos que resultan ilegítimos por no tener respaldo legal alguno y que por
el daño ocasionado y la gravedad de los mismos, merecen la tutela inmediata que brinda el
amparo por vulnerar derechos fundamentales…' y en cuanto a los fundamentos de la
prescindencia de la subsidiariedad agregó que: 'La idea que inspira la protección no es otra
que el control al abuso del poder y el de velar por la observancia de la prohibición de hacerse
justicia por mano propia, control que se extiende tanto a las autoridades públicas como a los
particulares que lo ejercen de manera arbitraria por diferentes razones y en determinadas
circunstancias', (…). Bajo el razonamiento de que un Estado unitario, social de derecho, con
características propias, cuya población está conformada por los bolivianos y bolivianas, las
diversas naciones y pueblos indígenas originarios campesinos, las comunidades interculturales
y afrobolivianas, tal cual establece los arts. 1 y 3 de la CPE, los actos al margen del pluralismo
jurídico y convivencia de las diversas jurisdicciones, que por su arbitrariedad e intolerancia se
constituyen en vías o medidas de hecho, o justicia incontrolada a mano propia, son situaciones
intolerables que deben ser controladas o evitadas, este tribunal a través de la SC 0148/2010-R
de 17 de mayo (…), señaló que: 'Tratándose de la acción de amparo constitucional como medio
reparador ante dichas situaciones excepcionales de medidas de hecho, se debe tener presente
que tanto en la configuración de la abrogada como de la vigente Constitución, ha tenido y tiene
una naturaleza subsidiaria, (…). No obstante, existen situaciones excepcionales en las que el
agotamiento de tales vías implicaría la consumación irreversible de la vulneración del derecho,
con el consiguiente daño irremediable, en cuyo caso la tutela resultaría ineficaz, en el que por
la existencia de acciones de hecho o justicia directa o a mano propia, que puede ser proveniente
de parte de autoridades o funcionarios públicos, o de particulares, se hace urgente la tutela
inmediata, prescindiendo de las vías legales que pudiesen existir, a efectos de que cesen las
ilegalidades y actos hostiles, con la consiguiente afectación inclusive de otros derechos
fundamentales, por tanto en esos casos corresponde ingresar al análisis de fondo de la
problemática planteada'” (entendimiento asumido por las SSCC 1450/2010-R y 0545/2011-R).

III.2. Requisitos que deben cumplir para considerar una determinada situación como
medida de hecho

En el presente caso, y por lo señalado precedentemente, se evidencia que opera la excepción a la


regla de la subsidiariedad que hace a la acción de amparo constitucional, toda vez que, se trata
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 344
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de una denuncia de avasallamiento de la propiedad privada de los accionantes, realizada con


violencia y amenazas inclusive de muerte

En ese sentido, se sigue el entendimiento contenido en la SC 0148/2010-R de 17 de mayo, que


prevé requisitos que se deben cumplir para considerarse una situación como medida de hecho y
hacer abstracción de las exigencias procesales, señalando que:

“1) Debe existir una debida fundamentación y acreditación objetiva de que efectivamente se
está frente a una medida de hecho o justicia a mano propia, donde el agraviado o accionante se
encuentre ante una situación de desprotección o desventaja frente al demandado, o agresor, sea
autoridad, funcionario o particular o grupo de personas, por la desproporcionalidad de los
medios o acción; la presentación de la acción de amparo constitucional debe ser de manera
oportuna e inmediata, haciendo abstracción de la subsidiariedad. De lo contrario no justificaría
la premura ni gravedad y deberá agotar las instancias jurisdiccionales o administrativas
pertinentes según sea el caso, y agotadas las mismas, acudir a la jurisdicción constitucional.

2) Necesariamente se debe estar ante un inminente daño irreversible o irreparable, ya sea


agravando la lesión ya consumada, o que ello provoque la amenaza de restricción o supresión a
otros derechos fundamentales. Situaciones que deben ser fundamentadas y acreditadas.

3) El o los derechos cuya tutela se pide, deben estar acreditados en su titularidad; es decir, no
se puede invocar derechos controvertidos o que estén en disputa, atendiendo claro está, a la
naturaleza de los mismos.

4) En los casos en que a través de medios objetivos se ponga en evidencia que existió
consentimiento de los actos denunciados y acusados como medidas de hecho, no corresponde
ingresar al análisis de la problemática, por cuanto esta acción de defensa no puede estar a
merced del cambio o volatilidad de los intereses del accionante …” (las negrillas nos
corresponden).

Dentro de ese contexto jurisprudencial asumido por el Tribunal Constitucional, se advierte que
ninguna autoridad pública o persona particular, puede realizar acciones contrarias a la
Constitución Política del Estado, pues ello implica abandonar el ámbito de la legalidad y pasar a
formar parte de actuaciones de hecho contrarias al Estado de derecho, siendo aquellas las que
merecen la tutela excepcional de la acción de amparo constitucional.

En consecuencia, se advierte la indiscutible necesidad de tutelar los derechos de las personas


propietarias de inmuebles que sufran lesión en su derecho a la propiedad por un despojo o
avasallamiento de su posesión por actos o vías de hecho protagonizados por terceros, sean estos
particulares o autoridades públicas.

III.3. Análisis del caso concreto

En el presente caso, los accionantes, denuncian que los demandados avasallaron su propiedad,
con violencia y amenazas inclusive de muerte, despojando de sus terrenos a sus detentadores que
estaban plenamente facultados para ocupar los mismos, sin que medie motivo alguno.
De acuerdo a la jurisprudencia constitucional desarrollada precedentemente, resulta ser aplicable
a la problemática planteada por los accionantes, en el entendido que demostraron y acreditaron
objetivamente las medidas de hecho, como consta en las Conclusiones II.2 del presente fallo,
advirtiéndose el registro de propiedad del inmueble en DD.RR. inscripciones bajo las partidas
computarizadas 7.02.2.06.0078845, situado en la provincia Andrés Ibañez del departamento de
Santa Cruz a nombre de Ovidio Vaca Diez Jiménez y María Isabel Castedo Vaca Diez; de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 345
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

misma forma se encuentra la partida 7.01.06.0025403, a nombre de Mauricio Joaquín Pessoa


Rivero y Elar Hajalmar Cortez Justiniano, la partida 7.01.1.06.0066696 correspondiente a Elías
Daher Salame; terrenos ubicados en el “km. 5 y medio carretera norte”, zona el Valle,
acreditando con dicha documentación ser los legítimos propietarios de los terrenos que fueron
violentamente ocupados por los demandados; cumpliéndose por ende, el primero de los
elementos para que sea procedente la tutela por medidas de hecho, estando el derecho a la
propiedad debidamente demostrado y no cuestionado.

En cuanto al segundo supuesto, relativo a la evidencia, tampoco controvertida, que los


demandados no estaban en posesión del bien inmueble, sino que con acciones violentas
ocuparon la propiedad reclamada, situación que no fue cuestionada por los demandados en su
confuso y contradictorio informe presentado; por cuanto por un lado, indican que se encuentran
en posesión quieta y pacifica por más de un año en terrenos distintos a los reclamados; en
audiencia adjuntó una copia de un proceso interdicto de retener la posesión que incoaron Marina
Masaby Vargas y Adalberto Rodríguez Flores -demandados en la presente acción tutelar-, el 11
de marzo de 2009, señalando que se encuentran en posesión quieta, pacifica y continuada en la
propiedad de los demandados -ahora accionantes-, demanda que es admitida por el

Juez Quinto de Instrucción en lo Civil, a la primera de los nombrados, dispuso corra traslado a
los demandados a objeto de que prueben la posesión o tenencia actual, los actos materiales o
amenazas de perturbación y la fecha en que hubiese ocurrido; sin embargo, estos no continuaron
con el referido proceso, habiéndose quedado con el auto de admisión, lo que nos lleva a concluir
que es cierta y evidente la denuncia en la presente acción de amparo constitucional.

Asimismo, no desvirtuaron lo señalado por los accionantes, en sentido que hubieren ingresado a
sus terrenos con violencia y amenazas, al contrario presentaron un plano con proyecto de
urbanización, pero de otra propiedad, que nada tiene que ver con los terrenos avasallados, siendo
mas bien distantes a dos unidades a lado derecho; indicando que no invadieron ninguna
propiedad; empero, dicha documentación no resulta suficiente para contrarrestar la denuncia
efectuada, además que esta acusación de violencia se encuentra respaldada por el informe del
Oficial de Diligencias del Tribunal de garantías, que habiéndose constituido en el domicilio
señalado acompañado de Edgar Enzo La Fuente Rodríguez, a objeto de practicar la notificación
con la presente acción de amparo, fueron agredidos, lo que ocasionó tengan que huir del lugar.

Dentro de ese marco, y aplicando el razonamiento señalado en los Fundamentos Jurídicos III.1 y
III.2, del caso en análisis, se evidencia que efectivamente los demandados ingresaron a la
propiedad, ejerciendo acciones de violencia y amenazas hacia los propietarios, mas cuando estos
se presentaron en el lugar de los hechos a fin de demostrarles con documentación el derecho
propietario y posesorio, fueron amenazados inclusive de muerte, constituyéndose estos actos en
vías de hecho que no encuentran sustento legal alguno y que hacen viable la protección a través
de esta garantía jurisdiccional, prescindiendo incluso de las vías legales que pudieran existir ante
el daño inminente al que está expuesta toda persona cuya propiedad privada sea despojada o
avasallada por terceros ajenos con acciones de violencia, con la consiguiente vulneración de
derechos constitucionales.

III.4. Otras consideraciones

Resuelta como se encuentra la problemática planteada; empero, de la documentación arrimada al


expediente se evidencia una demanda de interdicto de retener la posesión contra los ahora
accionantes, proceso que se encontraría pendiente de resolución al momento de la interposición
de la acción de amparo constitucional, situación que no se puede soslayar.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 346


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Consecuentemente, la activación de la jurisdicción constitucional se hace efectiva prescindiendo


de la subsidiariedad de la presente acción, dado que los derechos vulnerados deben ser
inmediatamente restablecidos, sin que previamente se agoten las instancias legales establecidas
en el ordenamiento jurídico, de no hacerlo supondría una demora injustificada en la tutela de
derechos fundamentales, siendo ya ineficaz por tardía, cualquier protección judicial posterior
frente al acto arbitrario que los vulneró, en razón a ello, se otorga tutela provisional, en tanto la
justicia ordinaria resuelva lo que corresponda en derecho.

En merito a las consideraciones expuestas, el Tribunal de garantías al conceder la tutela


impetrada, aplico correctamente la jurisprudencia constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 45/2009 de 6 de octubre, cursante de fs. 129 a 130, pronunciada por
la Sala Civil Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de
justicia- de Santa Cruz y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, con la modificación
que la misma es provisional.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0045/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA LIQUIDADORA
Mag. Relatora: Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20697-42-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 297/09 de 12 de octubre de “2008”, cursante de fs. 143 a 146 vta.,
pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Juan Carlos
Crespo Infante contra José Luis Baptista Morales y Ángel Irusta Pérez, Ministros de la
Sala Penal Segunda de la Corte Suprema de Justicia, -ahora Tribunal Supremo de
Justicia-.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

En el memorial presentado el 30 de septiembre de 2009, cursante de fs. 53 a 62, el accionante


manifestó lo siguiente:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 347
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido contra Gonzalo Ruiz Martínez y Cesar Cladera Cabrera, el
primero de los acusados solicitó la extinción de la acción penal, al Tribunal de apelación, siendo
la Sala Penal Tercera de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de
Justicia- de Cochabamba, mediante Auto de Vista de 21 de abril de 2005, determinó la extinción
de la acción penal, decisión que fue recurrida por el querellante ahora accionante, a través de
una acción de amparo constitucional, que fue resuelta mediante Resolución de 7 de septiembre
de 2006, concediendo la tutela y por consiguiente se anuló el Auto de Vista señalado supra, y se
dispuso la emisión de nueva resolución en estricta observancia a la dictada; en revisión el
Tribunal Constitucional pronunció la SC 1211/2006-R de 30 de noviembre, aprobando la
resolución del Tribunal de amparo; en cumplimiento a dicha Sentencia, la Sala Penal Tercera,
dictó la Resolución de 26 de marzo de 2007, en la que dispuso el rechazo de la solicitud de
extinción de la acción penal incoada por el acusado.

Por otra parte, refiere que apeló la decisión de primera instancia, -Sentencia de 30 de mayo de
2003, que declaró extinguida la acción penal-, y la Sala Penal Tercera, mediante Auto de Vista
de 9 de junio de 2007, resolvió confirmar la Sentencia apelada, razón por la que interpuso
recurso de nulidad y casación, radicándose ante la Sala Penal Segunda de la entonces Corte
Suprema de Justicia.

Efectuadas dichas actuaciones, señaló que el acusado Gonzalo Ruiz Martínez, el 14 de junio de
2007, interpuso recurso de amparo constitucional contra los Vocales de la Sala Penal Tercera de
la Corte Superior, que pronunciaron el Auto de Vista de 26 de marzo de 2007, rechazando la
excepción de extinción de la acción penal, recurso que fue resuelto por la Sala Civil Segunda,
denegando la tutela, resolución que es remitida en revisión al Tribunal Constitucional.

Refiere que, estando el recurso en la instancia de revisión, el co-imputado Gonzalo Ruiz


Martínez, el 6 de febrero de 2008, presenta una nueva solicitud de extinción de la acción penal,
esta vez ante la Corte Suprema de Justicia, haciéndoles conocer además a dichas autoridades,
que para la restitución de sus derechos fundamentales, vulnerados por la Sala Penal Tercera
interpuso recurso de amparo constitucional y que el mismo se encontraría en revisión ante el
Tribunal Constitucional; no obstante, del conocimiento asumido, que imposibilitan la
consideración de una nueva resolución al pedido de extinción de la acción penal, las autoridades
demandadas, procedieron a dictar el Auto Supremo 359 de 15 de abril de 2009, por el que
declaran extinguida la acción penal, incurriendo en actos ilegales y omisión indebida,
vulnerando valores supremos y principios fundamentales del debido proceso y la seguridad
jurídica, así como la línea jurisprudencial en lo relativo a los arts. 44 y 102.I de la Ley del
Tribunal Constitucional (LTC).

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante señala la vulneración de sus derechos al debido proceso y a la “seguridad


jurídica”, citando al efecto los arts. 115.II, 117 y 178.I de la Constitución Política del Estado
(CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, se anule y deje sin efecto el Auto Supremo 359, así como se ordene
a las autoridades demandadas, emitan una nueva resolución, indicando de manera fundamentada
la improcedencia de la solicitud de la extinción de la acción y resolviendo el fondo del recurso
de nulidad y casación interpuesto por su persona.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 348
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 12 de octubre de 2009, según consta en el acta cursante de fs.
141 a 142 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante, por intermedio de su abogada ratificó los términos expuestos en el memorial de


demanda.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

José Luis Baptista Morales y Ángel Irusta Pérez, Ministros de la Sala Penal Segunda y Primera,
respectivamente de la entonces Corte Suprema de Justicia, remitieron informe escrito cursante
de fs. 139 a 140 y vta., manifestando lo siguiente: a) El querellante ahora accionante, el 27 de
agosto de 2007, interpuso recurso de nulidad y casación impugnando el Auto de Vista emitido
por la Sala Penal de la Corte Superior, que confirmó la Sentencia que en primera instancia
declaró la inocencia de Gonzalo Ruiz Martínez; b) Que estando la causa esperando turno para
resolución, el 6 de febrero de 2008, el co-imputado Gonzalo Ruíz Martínez, solicitó la extinción
penal por vencimiento del plazo máximo de duración del proceso y, que al ser de previo y
especial pronunciamiento fue resuelta mediante Auto Supremo 359, declarando extinguida la
acción penal y el archivo de obrados; c) El hecho de que la resolución de amparo que declaró
improcedente el recurso interpuesto por el co-procesado, impugnando el Auto de Vista de 26 de
marzo de 2007, emitido por la Sala Penal Tercera de la Corte Superior, que rechazó la solicitud
de extinción de la acción penal, este pendiente de revisión ante el Tribunal Constitucional, no es
un impedimento o prohibición para que el afectado vuelva a formular una nueva solicitud de
extinción de la acción penal; d) La declaratoria de improcedencia no constituye un cambio de la
situación fáctica anterior a la interposición del recurso de amparo; e) Respecto de la línea
jurisprudencial que señala el accionante y que hace referencia a la circunstancia de cuando el
amparo es declarado improcedente el recurrido deberá aguardar el fallo que emita el Tribunal
Constitucional, criterio que fue modificado por la SC 0301/2007-R; f) En ese sentido es erróneo
asumir que el Tribunal de Casación no pueda resolver la solicitud de extinción de la acción
penal; y g) No se ha vulnerado el derecho al debido proceso ni a la seguridad jurídica, sino sólo
se dio estricto cumplimiento a la ley.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

Gonzalo Ruíz Martínez, tercero interesado presentó informe escrito cursante de fs. 137 a 138
vta., indicando que: 1) No existe vulneración del art. 102.I de la LTC, por parte de los Ministros
demandados, toda vez que entre el objeto del recurso de amparo de 14 de junio de 2007 y la
Resolución de 5 de septiembre de 2007, no existe ninguna conexión ni dependencia jurídica, con
la discusión del tema de fondo, que es la extinción de la acción penal, toda vez que no se
buscaba revertir la decisión del rechazo de la extinción, sino que se emita una nueva resolución
motivada y fundamentada, situación que tiene una sustancial diferencia con los objetivos y
naturaleza propia de una apelación o un recurso de casación; 2) Al no existir un medio de
impugnación sobre el fondo de la decisión de la solicitud de la extinción de la acción penal
cuando se la solicita ante el Tribunal de alzada, conforme acredita la jurisprudencia
constitucional (SSCC 1305/2005-R y 1211/2006-R), no existe prohibición de la ley, en sentido
de no solicitar la extinción de la acción penal ante la Corte Suprema de Justicia; 3) Por todo ello
se infiere que los Ministros demandados han motivado y fundamentado legalmente el Auto
Supremo 359, no existiendo vulneración alguna de la ley ni de derechos constitucionales.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 349


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.2.4. Resolución

Mediante Resolución 297/09, cursante de fs. 143 a 146 vta., la Sala Penal de la Corte Superior
del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de Justicia- de Chuquisaca, constituida en
Tribunal de garantías, concedió parcialmente la tutela solicitada, y determinó dejar sin efecto el
Auto Supremo 359 de 15 de abril de 2009, debiendo las autoridades demandadas emitir uno
nuevo en base a los fundamentos expuestos en la misma, no siendo atendible la solicitud
respecto la forma en que debe resolver en el fondo la excepción de la extinción. Fundando su
resolución en lo siguiente: i) Los Ministros demandados, al pronunciar el Auto Supremo 359,
por el que declara extinguida la acción penal, han vulnerado el debido proceso y seguridad
jurídica, que pese a tener conocimiento de la existencia de otro fallo emergente de un recurso
constitucional de amparo que se halla en revisión ante el Tribunal Constitucional, ingresan a
analizar la merituada excepción; ii) Independientemente de la forma en que fue resuelta, era
imperioso que el actual Tribunal Supremo de Justicia, considere el hecho de estar pendiente en
revisión el recurso de amparo constitucional.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011, la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. De fs. 1 a 3 cursa el Auto de Vista de 21 de abril de 2005, emitido por la Sala Penal Tercera
de la entonces Corte Superior del Distrito Judicial de Cochabamba, que declara extinguida la
acción penal, solicitada por Gonzalo Ruiz Martínez.

II.2. La Sala Civil Segunda de ese mismo Distrito Judicial, dentro del recurso de amparo
constitucional interpuesto por Juan Carlos Crespo Infante contra los Vocales de la Sala Penal
Tercera, pronunció la Resolución de 7 de septiembre de 2006, concediendo la tutela demandada
y en consecuencia anuló y dejó sin efecto el Auto de Vista de 21 de abril de 2005 (fs. 4 a 5).

II.3. En cumplimiento a las resoluciones constitucionales -Auto de Vista de 7 de septiembre de


2007 y SC 1211/2006-R de 30 de noviembre-, la Sala Penal Tercera de la Corte Superior,
mediante Auto de Vista de 26 de marzo de 2007, rechazó la solicitud de extinción de la acción
penal interpuesta por Gonzalo Ruíz Martínez y dispuso se prosiga hasta su conclusión (fs. 13 a
15).

II.4. La misma Sala Penal Tercera, mediante Resolución de 9 de junio de 2007, resolviendo el
fondo de la apelación incoada por el accionante, confirmó la Sentencia de primera instancia (fs.
16 a 26 vta.). Mediante memorial de 27 de agosto de 2007, el accionante interpuso recurso de
nulidad y casación contra la merituada Resolución (fs. 27 a 32).

II.5. El 14 de junio de 2007, el co-procesado Gonzalo Ruiz Martínez interpuso recurso de


amparo constitucional contra los Vocales de la Sala Penal Tercera, que pronunciaron la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 350
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Resolución de 26 de marzo de 2007 (fs. 33 a 39 vta.). Recurso que fue denegado por la Sala
Civil Segunda, mediante Auto de Vista de 5 de septiembre de 2007 (fs. 41 a 42 vta.).

II.6. Gonzalo Ruiz Martínez, co-imputado, por memorial de 6 de febrero de 2008, se dirigió a la
entonces Corte Suprema de Justicia, solicitando la extinción de la acción penal (fs. 45 a 49 vta.).
Mediante Auto Supremo 359 de 15 de abril de 2009, la Sala Penal Segunda de la referida Corte,
declaró extinguida la acción penal y dispuso el archivo de obrados (fs. 50 a 51).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante considera que se han vulnerado sus derechos y principios constitucionales al


debido proceso y la seguridad jurídica, toda vez que las autoridades demandadas, pronunciaron
el Auto Supremo 359, declarando extinguida la acción penal, solicitada por el co-procesado
Gonzalo Ruíz Martínez, pese al conocimiento que asumieron de la excepción planteada, para la
restitución de sus derechos fundamentales, que fueron vulnerados por los Vocales de la Sala
Penal Tercera de la Corte Superior, y que al rechazar la solicitud de extinción de la acción penal,
este interpuso recurso de amparo constitucional, el mismo que fue denegado y que se encontraría
en la instancia de revisión ante el Tribunal Constitucional pendiente de Resolución al momento
de presentar la nueva solicitud de excepción de la extinción, actuados que imposibilitaban la
consideración de dicho pedido. En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales
argumentos son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos de los derechos fundamentales
del accionante, a fin de otorgar o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza y alcance de la acción de amparo constitucional

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


amparo constitucional, estableciendo que: “…tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o
indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan,
supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la misma Constitución
y las leyes” (art. 128); es decir, que esta garantía jurisdiccional tiene por finalidad la protección
de derechos fundamentales y garantías constitucionales cuando este siendo vulnerados.
Conforme a este desarrollo constitucional se advierte el contenido del art. 94 de la LTC.

III.2. Respecto al alcance y ámbito de protección de las jurisdicciones ordinaria y


constitucional

Previamente a dilucidar el fondo de la problemática planteada es necesario precisar un


entendimiento asumido por la jurisprudencia constitucional, en similares casos en los que se
solicito la suspensión de los actos ejercidos por las autoridades demandadas, por el solo hecho
de presentar una acción tutelar, en tanto se proceda a la revisión por parte de este Tribunal
Constitucional; la doctrina constitucional señaló que: “…la actividad jurisdiccional ordinaria
no está sometida a los actos de la jurisdicción constitucional de hecho, de modo que la mera
interposición de un recurso ante esta jurisdicción no implica que la autoridad judicial en la
jurisdicción ordinaria deba suspender la celebración de actos ni abstenerse de dictar
resoluciones” (SC 0670/2011-R de 16 de mayo).

Razonamientos que, la jurisprudencia constitucional ha asumido, en la SC 1491/2005-R de 22


de noviembre, cuando señaló que: ”…la sola presentación de un recurso tutelar no suspende la
actividad de los jueces en los procesos a su cargo; modulando el razonamiento expresado en la
SC 1573/2002-R de 19 de diciembre, en cuanto a los efectos de una resolución de amparo
dictada por los tribunales de garantía, en cuanto a la labor de los jueces en los procedimientos
judiciales en curso, de tal manera que no es evidente que una sentencia de improcedencia del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 351
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

recurso de amparo constitucional sea suspensiva de la competencia del juzgador, pues la


actividad jurisdiccional ordinaria no está sometida a los actos de la jurisdicción constitucional,
tal como fue expresado en la SC 1206/2003-R; jurisprudencia reiterada por la SC 2194/2010-R
de 14 de noviembre.

Resulta importante agregar, que si bien, el Constituyente como el legislador, han previsto la
revisión de las resoluciones en las acciones de amparo constitucional, acción de libertad, acción
de cumplimiento, acción popular, acción de protección de privacidad, por el Tribunal
Constitucional Plurinacional, proceso constitucional que concluye cuando éste se pronuncia;
empero, dicha instancia no deja en statu quo la competencia del juzgador ordinario, conforme se
anotó precedentemente, este pude continuar dictando resoluciones o ejecutando los actos que el
ejercicio de sus funciones implique.

III.3. Análisis del caso concreto

De antecedentes y de los argumentos expuestos por el accionante, se advierte que el problema


jurídico planteado es el accionar de los Ministros demandados, toda vez que, -según el
accionante- no podían conocer una segunda solicitud de extinción de la acción penal incoada por
el coimputado, por cuanto existía un recurso de amparo constitucional en la instancia de revisión
ante el Tribunal Constitucional, lo que implicaba que las autoridades demandadas se
encontraban impedidos de resolver dicha excepción en tanto no se pronuncie la resolución final
por el Tribunal Constitucional.

Sin embargo, conforme fue expresado en el Fundamento Jurídico anterior, la sola presentación
de una acción tutelar no suspende la actividad de los jueces en los procedimientos judiciales a su
cargo, y más aún como en el presente caso que atendiendo a la naturaleza de la excepción
planteada por mora procesal, es factible la presentación de la excepción más de una vez, con
supuestos fácticos de hecho distintos, tomando en cuenta además el tiempo transcurrido entre la
primera solicitud y una posterior que pudiera presentarse, de modo que los Ministros
demandados, podían continuar dictando las resoluciones y ejecutando los actos que el ejercicio
de su labor implica, sin que por ello se lesione los derechos del accionante; por cuanto la
existencia de un amparo constitucional que dilucidará una primera solicitud de extinción de la
acción no impide la presentación, sustanciación y resolución de una segunda solicitud de
excepción de la misma naturaleza, que tiene sus propios fundamentos y elementos, -se asume-
distintos a la primera.

Finalmente, resulta necesario aclarar que si bien este aspecto no fue cuestionado por el
accionante; empero, al estar vinculado el problema jurídico con la actuación y competencia de
los demandados, es importante dejar claramente establecido el razonamiento asumido por el
Tribunal Constitucional respecto de la competencia y el momento procesal para el planteamiento
de la excepción de la extinción de la acción penal; en ese sentido, se advierte que: “Corresponde
en forma exclusiva a los jueces y tribunales de primera instancia conocer la excepción de
extinción de la acción penal, que podrá formularse únicamente en la etapa preparatoria así
como en el transcurso del juicio oral hasta antes de dictarse sentencia. Ante el rechazo de la
excepción planteada en el juicio oral, el agraviado podrá reservarse el derecho de impugnarla
como agravio de apelación restringida” (SC 1716/2010-R de 25 de octubre, modulada por la SC
1529/2011-R de 11 de octubre).

En consecuencia el Tribunal de garantías, al conceder parcialmente la acción tutelar, no


efectuó una correcta aplicación de la jurisprudencia constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 352


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011, en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución 297/09 de 12 de octubre de “2008”, cursante de fs. 143 a 146 vta.,
pronunciada por la Sala Penal de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Chuquisaca, en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0046/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19444-39-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución de 25 de marzo de 2009, cursante de fs. 149 a 154 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Marco Antonio Baldivieso Jinés
en representación de Román Mancilla Rodríguez, Ausberto Cueto Flores, Lucio Segovia
Barriga y Pastor Mérida Soto, representantes del Pacto Intersindical de Trabajadores
Municipales de Sucre contra Oswaldo Fong Roca, Elena Lowenthal Claros, Teresa
Rosquellas Fernández, Lilian Paredes Gonzales, Alejandro Nava Achá, Cesar Suárez
Saavedra, Wilbur Daza Gutiérrez y Marcela Rita Ortiz Torricos, Vocales de Sala Plena;
Dhery Prieto Melgarejo, Conjuez; Eva Mendizábal Barrenechea, Jueza Quinta de Partido
en lo Civil y Comercial, todos de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Chuquisaca.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURIDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 9 de marzo de 2009, cursante de fs. 70 a 80, el accionante, por
sus representados manifestó lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Ante la infracción de derechos laborales, los trabajadores del Gobierno Municipal de Sucre,
interpusieron un trámite laboral ante la Jefatura Departamental del Trabajo de Chuquisaca.
Habiendo fracasado el proceso de conciliación el Tribunal Arbitral pronunció el Laudo Arbitral

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 353


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de 25 de agosto de 2008, declarando probado el pliego de reclamaciones, ordenando la


restitución del bono de antigüedad y el bono de incentivo municipal.

El Alcalde a.i Fidel Herrera Ressini, planteo un ilegal recurso de anulación ante la mencionada
Jefatura Departamental del Trabajo, el cual fue rechazado, lo que motivó que la Alcaldesa,
Aydée Nava Andrade, formule recurso de compulsa ante el Juez de Partido de turno en lo Civil
y Comercial del Distrito Judicial de Chuquisaca.

El recurso de compulsa formulado fue resuelto por la Juez Quinto de Partido en lo Civil y
Comercial, declarando legal la compulsa aplicando indebidamente el Código de Procedimiento
Civil y la Ley de Arbitraje y Conciliación, a un caso laboral, acto ilegal que vulnera el principio
de legalidad, la garantía al debido proceso el derecho a la seguridad jurídica, al extremo de
generar un nuevo procedimiento que no esta previsto en ninguna norma jurídica.

El Jefe Departamental de Trabajo, aunque de manera equivocada planteo recurso de apelación


contra la Resolución que declara legal la compulsa que dio lugar a que la Jueza de la causa,
emita el Auto de 6 de octubre de 2008, rechazando el recurso de apelación con los mismos
argumentos jurídicos basado; es decir, en la Ley de Arbitraje y Conciliación y el Código de
Procedimiento Civil, sin pronunciarse sobre el art. 6 de la Ley y Arbitraje y Conciliación (LAC),
tratándose de un nuevo acto ilegal que vulnera el principio de legalidad.

Refiere que, por la negativa de la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial se compulsó
ante la Sala Civil Segunda de la Corte Superior, que en lugar de velar por el debido proceso
saneándolo obro contra el mandato de los arts. 16.IV de la Constitución Política del Estado
abrogada (CPEabrg), y 15 del Código de Procedimiento Civil (CPC), declarando ilegal la
compulsa y disponiendo que se radique la causa ante el Juzgado Quinto de Partido en lo Civil y
Comercial para que se tramite el recurso de anulación; empero, esta autoridad, pretendió
subsanar la ilegalidad remitiendo el proceso al juzgado laboral, expediente que fue devuelto por
el Juez Laboral al estar vigente el Auto de Vista emitido por la Sala Civil Segunda de la Corte
Superior, donde se ordenó se radique y tramite el recurso de anulación en el Juzgado Quinto de
Partido en lo Civil y Comercial esta autoridad suscitó conflicto de competencia mediante Auto
Interlocutorio de 6 de enero de 2009, generando que la Sala Plena de la Corte Superior emita el
Auto de 9 de febrero del mismo año, determinando que no existe conflicto de competencia,
disponiendo que la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial conozca la causa e imprima
el tramite previsto por el art. 66 de la Ley de Abreviación Procesal Civil y de Asistencia
Familiar (LAPCAF).

Las Resoluciones pronunciadas tanto por la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial,
consistentes en los Autos de 24 de septiembre, 6 de octubre, 19 de noviembre y 8 de diciembre,
todas de 2008, y las Resoluciones de la Sala Civil Segunda de la Corte Superior, expresada en el
Auto de Vista 317/2008 de 20 de octubre, Auto de Vista Complementario 330/2008 de 24 de
octubre, y finalmente la Resolución 4/2009 de 9 de febrero, pronunciada por la Sala Plena, son
ilegales y vulneran principios derechos y garantías constitucionales; además de incurrir en
omisiones de que el proceso se desarrolle sin vicios, conculcando el impulso procesal para la
efectivización de los derechos y el cumplimiento de las normas procesales de orden público
mediante procedimientos irregulares que han tratado inclusive de ser enmendados por la propia
Jueza .

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante denuncia la vulneración de los principios de especialidad, seguridad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 354


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

jurídica, debido proceso en su elemento al juez natural, probidad, celeridad, economía procesal y
los derechos a “la seguridad jurídica” al trabajo y a percibir una remuneración justa, a la
defensa, al debido proceso de sus representados, citando al efecto los arts. 7 incs. a), b) y j) y
16.I, II y IV de la CPEabrg.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela provisional, dejando sin efecto el ilegal proceso iniciado por la
Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial, “evitando la retardación y posibles trabas a la
ejecución del justo Laudo Arbitral”, ordenando a las autoridades demandadas, dejen sin efecto:
i) Los Autos 4/2009 y su Complementario 6/2009; ii) Los Autos de Vista 317/2008 y el
Complementario 330/2008; y, iii) Los Autos de 24 de septiembre y de 6 de octubre, ambos de
2008. Asimismo, solicita medidas cautelares de suspensión de tramite de anulación y de
indemnidad a objeto de que no se tome medidas represivas contra sus poder conferentes.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 25 de marzo de 2009, según consta en el acta cursante de fs.
146 a 148 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante por sus representados ratificó íntegramente los términos de la acción planteada y
añadiendo señaló que en los informes presentados por las autoridades demandadas reconocen
que no es competencia de la vía ordinaria el conocimiento de la anulación de un laudo arbitral.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Lilian Paredes Gonzáles, autoridad demandada, presentó informe escrito cursante a fs. 118 vta.,
señalando: a) No participó en la emisión de ninguna resolución dentro del referido proceso
laboral; b) Si bien la Sala Plena emitió la Resolución 4/2009, pero ella fue disidente; y, c) De
ello se infiere que no incurrió en acciones y omisiones ilegales, solicitando se deniegue la
presente acción respecto de su autoridad.

Por su parte, Teresa Rosquellas Fernández, Vocal codemandada, hizo llegar informe escrito
cursante de fs. 119 a 122, en el que expresa: 1) La Sala Plena emitió el Auto de Vista 4/2009, al
no encontrar conflicto alguno de competencia en el marco de lo previsto por el art. 11 y ss. del
CPC, declaró que no tiene nada que dirimir conforme al art. 18 del mismo Código, razón por la
que no es evidente que el Tribunal colegiado hubiere vulnerado la garantía a la seguridad
jurídica, en todo caso fue en resguardo del principio de legalidad; 2) Mediante Auto
Interlocutorio de 24 de septiembre de 2008, la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial
declaró legal la compulsa, por tanto “debió dar estricta aplicación a lo dispuesto por el art. 286
del CPC, e imprimir el trámite previsto por el art. 66 de la LAC y no ingresar en un largo,
tedioso, inusual e irregular trámite”; 3) No es evidente que se hubiere vulnerado el debido
proceso, porque la competencia del Tribunal Colegiado se abrió única y exclusivamente para
definir la existencia o inexistencia de conflicto entre dos jueces y no como alega el accionante
que se hubiese admitido la tramitación de un laudo arbitral en materia laboral ante un Juez en lo
Civil y Comercial.

A su vez, Marcela Rita Ortiz Torricos y Wilbur Daza Gutiérrez, mediante informe escrito,
cursante de fs. 139 a 145, señalaron: i) Existe falta de legitimación activa, por cuanto las
Resoluciones cuestionadas no han sido pronunciadas dentro de la tramitación de un recurso de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 355
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

compulsa, que haya presentado su parte, sino otra persona como en el presente, es el Jefe
Departamental del Trabajo de Chuquisaca; ii) Lo que pretende el accionante es utilizar de
manera maliciosa esta acción extraordinaria para terminar con la tramitación de un recurso de
anulación que se inició como emergencia o consecuencia de un Laudo Arbitral; iii) En los Autos
de Vista y Auto de Sala Plena cuestionados, se dispuso la radicatoria de la causa y la tramitación
del recurso de anulación en aplicación de los arts. 286 del CPC y 66 de la LAC, por las
actuaciones de la propia Jueza, quien al declarar legal la primera compulsa (correspondiente a la
negativa del recurso de anulación), tiene que asumir las consecuencias de su determinación hasta
el final o hasta resolver el recurso de anulación, no siendo evidente que se hubiera obligado a la
Jueza a tramitar el citado recurso; iv) En ningún momento, en los Autos de Vista como el de
Sala Plena, se ha realizado un análisis de fondo de la litis en sentido que corresponde o no
anularse el Laudo Arbitral, si la jueza civil tiene o no competencia para conocer cuestiones
laborales; y, v) La actuación de los Vocales tanto de la Sala Civil Segunda como de Sala Plena,
se ha enmarcado al limite de sus competencias o facultades, refiriéndose en un caso al objeto de
la competencia del recurso de compulsa y en el otro al conflicto de competencia inexistente, por
lo que al emitirse las Resoluciones cuestionadas no se vulneró derechos y garantías
constitucionales de los representados del accionante, solicitando se deniegue la tutela impetrada.

I.2.3. Intervención de la tercera interesada

La tercera interesada Aydeé Nava Andrade, mediante su apoderado presentó informe escrito
cursante de fs. 127 a 129 vta., indicando lo siguiente: a) Los accionantes se olvidan que al haber
sido excluidos del ámbito de aplicación de la Ley General del Trabajo, los funcionarios
municipales por ser públicos, no le es aplicable el art. 6 de la LAC, es mas, taxativamente los
excluye, por lo que se abre la aplicación del art. 62 de la citada Ley, al haberse emitido un
Laudo Arbitral contrario al orden público en franca violación del art. 1 del Decreto
Reglamentario de la Ley General del Trabajo y porque no era materia arbitrable que contemple a
una institución pública -no empresa privada-; b) El Tribunal al dictar el Auto de Vista 317/2008,
dispuso que en el día se devuelva el expediente a la Jueza a quo a fin de que radique la causa y
prosiga hasta su conclusión, que de ninguna manera constituye un acto ilegal que la Jueza asuma
conocimiento del recurso de anulación; c) La determinación tomada en el Auto de Sala Plena, se
ajusta a los datos del proceso y a la normativa que se ha sujetado, por lo que las aseveraciones
de los accionantes no tiene ningún asidero legal; y, d) No es evidente que a los accionantes no se
le haya dado el derecho a la defensa y al debido proceso en lo que respecta al juez natural, que
en la causa que se ventila como es el recurso de anulación, la Jueza demandada al admitir la
compulsa adquirió la competencia, circunstancia ratificada por los Vocales de la Sala Civil
Segunda y Sala Plena de la Corte Superior del Distrito Judicial de Chuquisaca, por lo que
solicita se declare “improcedente” la tutela solicitada.

I.2.4. Resolución

Mediante Resolución de 25 de marzo de 2009, cursante de fs. 149 a 154 vta., los Conjueces de la
Corte Superior del Distrito Judicial de Chuquisaca, constituidos en Tribunal de garantías,
conceden la tutela solicitada, y en su mérito: 1) Deja sin efecto los Autos de 24 de septiembre y
6 de octubre, ambos del 2008, emitidos por la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial,
disponiendo que dicte nueva resolución conforme a derecho; 2) Asimismo, los Autos de Vista
317/2008, 330/2008, emitidos por la Sala Civil Segunda de la misma Corte Superior, así como
los Autos 4/2009 y 6/2009, dictados por Sala Plena; y, 3) Con responsabilidad para la Jueza que
será ejecutada en caso de no haberse aplicado la sanción que dispuso “el Tribunal Departamental
de Justicia, mediante Auto 4/2009 de 9 febrero”, con relación a los Vocales tanto de la Sala Civil
Segunda y de Sala Plena, sin responsabilidad por ser excusable. Bajo los siguientes
fundamentos:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 356
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

1) Los conflictos de índole laboral se sustancian por la vía de conciliación y arbitraje conforme
lo previsto por los arts. 105 al 113 de la Ley General Trabajo (LGT), concordante con los arts.
149 al 158 de su Decreto Reglamentario;

2) El art. 6.II de la LAC, indica que “las cuestiones laborales quedan excluidas del campo de
aplicación de la presente ley por estar sometidas a disposiciones legales que le son propias”;
consecuentemente el Auto de 24 de septiembre de 2008, emitido por la Jueza Quinta de Partido
en lo Civil y Comercial hace una incorrecta aplicación de los arts. 64.I y 65 de la mencionada
Ley, al no considerar que el antecedente primigenio del objeto de la litis, es un laudo arbitral
laboral y que dicha norma no es aplicable en razón del art. 6.II de la LAC, lo que originó que sus
actuaciones se aparten del debido proceso y el marco de la legalidad.

3) Si bien obró en el marco de la ley al pronunciar el Auto de 6 de octubre de 2008, por el cual
rechaza in limine el recurso de apelación del Jefe Departamental de Trabajo, pero esta situación
no enerva la incorrecta aplicación de la Ley de Abreviación Procesal, Civil y Asistencia
Familiar.
4) La Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial de Chuquisaca al dictar el
Auto de Vista 317/2008 de 20 de octubre, actúo en el marco de la competencia que le permite el
recurso de compulsa en cumplimiento de los arts. 283 inc. 1) y 295 del CPC, precautelando la
seguridad jurídica consagrada en el art. 7 inc. a) de la CPEabrg, además haciendo uso de la
facultad prevista por el art. 15 de la Ley de Organización Judicial abrogada (LOJ.1993), observó
que la Jueza erróneamente dispuso la devolución del expediente al Tribunal Arbitral para que
sea remitido al Juez de Partido en lo Civil, sin tomar en cuenta el alcance del art. 65 de la LAC;
consecuentemente cuando declara ilegal la compulsa lo hace en correcta aplicación de los arts.
105.4 de LOJ.1993 y 287 del CPC.

5) En relación al Auto 330/2008 de 24 de octubre, dictado por la misma Sala Civil Segunda,
referido a la complementación y enmienda así como los Autos 4/2009 y Auto 6/2009, ambos
emitidos por la Sala Plena de la Corte Superior del Distrito Judicial de Chuquisaca, fueron
emitidos de manera correcta en cumplimiento del marco jurídico aplicable.

6) El accionar de la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial al dictar el Auto de 24 de


septiembre de 2008, ha lesionado los derechos a la seguridad jurídica, y al debido proceso y el
principio de legalidad.

I.3 Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011, la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes se establecen las siguientes conclusiones:

II.1. Por Resolución Administrativa (RA) 201/2007, el Jefe Departamental de Trabajo de


Chuquisaca, resuelve reconocer legalmente a la Directiva del Sindicato de Trabajadores
Municipales Sucre, para la gestión 2007-2009 (fs. 3).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 357


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.2. A fs. 4, cursa un Acuerdo de Constitución del Pacto Intersindical de Trabajadores


Municipales de Sucre, de 12 de febrero de 2008, entre los Directivos de los sindicatos de
trabajadores municipales y el sindicato de trabajadores constructores municipales, los que
resolvieron en su artículo único, iniciar acciones legales que correspondan contra la autoridad
ejecutiva, Concejo Municipal o contra cualquier autoridad que se oponga al respecto de hacer
prevalecer sus derechos adquiridos y consolidados de todos los trabajadores del Municipio,
especialmente en la restitución del incentivo municipal y el bono de antigüedad que debe ser
calculado sobre el haber básico de cada trabajador.

II.3. El Jefe Departamental de Trabajo de Chuquisaca, a través de la RA 01/2009, resuelve


reconocer legalmente al Sindicato de Constructores Municipales Sucre, para la gestión 2008-
2010 (fs. 5).

II.4. El Tribunal Arbitral luego de analizado el pliego de reclamaciones presentado por el Pacto
Intersindical de Trabajadores Municipales de Sucre, más todos los actuados procesales, con la
jurisdicción y competencia que le otorga la Ley General del Trabajo, dicta el Laudo Arbitral de
25 de agosto de 2008, disponiendo la “restitución del bono de antigüedad, debiendo tomarse la
escala prevista en el art. 60 del Decreto Supremo (DS) 21060, teniendo como base el salario
básico de cada trabajador que tendrá un pago retroactivo al mes de enero de la presente gestión”.
Asimismo, determina la “restitución del incentivo municipal, derecho a ser pagado anualmente a
partir del presente año 2008”.

II.5. Fidel Herrera Ressini, Alcalde Municipal a.i, mediante memorial de 9 de septiembre de
2008, dirigido al Jefe Departamental de Trabajo, interpone recurso de anulación, solicitando se
conceda el mismo y se disponga el envío del expediente a un Juez de Partido de turno en lo Civil
y Comercial para que esta autoridad anule el Laudo Arbitral pronunciado (fs. 29 a 34 vta.).

II.6. Ante la negativa de conceder el recurso de anulación, Aydée Nava Andrade, Alcaldesa
Municipal, mediante memorial de 18 de septiembre de 2008, dirigido al Juez de Partido de turno
en lo Civil y Comercial, plantea recurso de compulsa (fs. 35 a 36).

II.7. Mediante Auto de 24 de septiembre de 2008, la Jueza Quinta de Partido en lo Civil y


Comercial, declaró legal la compulsa formulada, “debiendo el Tribunal previamente reencauzar
el tramite de acuerdo al art. 64 de la LAC, para luego remitir al Juez de Partido en lo Civil de
turno, con el recurso de alzada” (fs. 37).

II.8. El Jefe Departamental de Trabajo, por memorial de 1 de octubre de 2008, formula recurso
de apelación, rechazando el Auto que declara legal la compulsa, además le aclara a la Jueza
Quinta de Partido en lo Civil y Comercial que no es competente por razón de materia para
conocer el caso, por lo que el contenido del presente memorial no constituirá el reconocimiento
expreso ni tácito de su competencia, pidiéndole sea concedido para que el Tribunal superior
resuelva el enredo procedimental y salir por los fueros de la legalidad (fs. 40 a 41 vta.).
Mediante Auto de 6 de octubre de 2008, la Jueza de la causa, rechazó in limine el recurso de
apelación de la compulsa, por no existir norma que admita dicho recurso (fs. 42).

II.9. La Sala Civil Segunda de la Corte Superior, emitió el Auto de Vista 317/2008 de 20 de
octubre, declarando ilegal la compulsa, disponiendo que en el día se devuelva el expediente a la
Juez a quo, para que radique la causa y tramite el recurso de anulación hasta su conclusión (fs.
17 a 19 vta.). Por Auto 330/2008, declaró no ha lugar a la complementación y enmienda
solicitada por el Jefe Departamental de Trabajo (fs. 20 a 21 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 358


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.10.El Jefe Departamental de Trabajo, mediante memorial de 19 de noviembre, dirigido a la


Juez Quinto de Partido en lo Civil y Comercial, opone excepción previa de incompetencia de
dicha autoridad para conocer el asunto por razón de materia, solicitándole declinar del
conocimiento de la causa y remitir al tribunal competente de la estructura administrativa del
trabajo (fs. 46 a 47 vta.). Por Auto de la misma fecha, la Juez, declina conocer el proceso, y
remite al Juez competente llamado por ley -Juez de Partido de turno de Trabajo y Seguridad
Social- (fs. 45 vta.).

II.11.La Alcaldesa Municipal, por memorial de 26 de noviembre de 2008, apela la decisión de la


Juez Quinto de Partido en lo Civil y Comercial, que declinó competencia, pidiendo sea
concedida y se remita al superior en grado para que éste revoque el Auto y disponga la
prosecución del proceso (fs. 56 a 57). Mediante providencia de 29 del referido mes y año, la
autoridad judicial, señaló que ha dejado de tener competencia en dicho proceso, por lo que
declara no ha lugar a la alzada (fs. 58).

II.12.Por Auto de 1 de diciembre de 2008, el Juez Primero de Partido de Trabajo, se inhibe


tramitar el citado proceso, toda vez que la Ley de Arbitraje y Conciliación, no es de su ámbito
de aplicación, además de cursar en el proceso el Auto de Vista que ordena su tramitación (fs.
52).

II.13.La Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial, pronuncia el Auto de 8 de diciembre


de 2008, disponiendo que en la vía de saneamiento procesal anula obrados desde “fs. 360 vlta a
fs. 380 inclusive” (fs. 11 y 60).

II.14.Por Auto de 6 de enero de 2009, la juzgadora suscita conflicto de competencia en arbitraje,


para que sea el Tribunal Superior en Sala Plena interprete y disponga la competencia del proceso
de arbitraje en materia social y laboral (fs. 62 y vta.). La Sala Plena del Tribunal Departamental
de Justicia, mediante Auto 4/2009 de 9 de febrero, declaró que no tiene nada que dirimir
conforme al art. 18 del CPC, y en ese mérito corresponde a la Juez conocer la causa (fs. 12 a 14
vta.). A su vez por Auto 6/2009, dispusieron no ha lugar a la complementación y enmienda
solicitada por los representados de los accionantes (fs. 15 a 16).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración de principios y derechos de los trabajadores del Gobierno


Municipal de Sucre, por las actuaciones indebidas de la Jueza Quinta de Partido en lo Civil,
quien declaró legal la compulsa formulada por la Alcaldía Municipal, a consecuencia del
rechazo que realizó el Jefe Departamental de Trabajo a un recurso de anulación interpuesto por
dicha institución, contra el Laudo Arbitral que declaró probado el pliego de reclamaciones,
disponiendo pago del bono de antigüedad y la restitución del incentivo municipal; habiendo
creado un procedimiento ilegal, que no tiene sustento jurídico, fue ratificado por los fallos
indebidos de la Sala Civil Segunda y los Vocales de Sala Plena, autoridades responsables para la
no ejecución del Laudo Arbitral. En consecuencia, en revisión, corresponde analizar si lo
alegado constituye vulneración de los derechos fundamentales, a objeto de conceder o denegar
la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional: Naturaleza jurídica y alcance

La acción de amparo constitucional, comprendida en el art. 128 de la CPE, está instituida por
mandato constitucional, como una acción de defensa contra actos u omisiones ilegales o
indebidos de los servidores públicos o de persona individual o colectiva, que restrinjan,
supriman o amenacen restringir o suprimir derechos fundamentales y garantías constitucionales.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 359
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Se constituye entonces en una de las acciones de defensa más amplia en cuanto al alcance de su
ámbito de tutela y protección de derechos, rigiendo para su interposición, los principios de
inmediatez y subsidiariedad, conforme lo establece el art. 129 de la Ley Fundamental;
denotándose de la naturaleza de esta acción su objeto de protección y resguardo de derechos en
el marco de los valores y principios ético-morales establecidos en la Constitución Política del
Estado, contribuyendo desde la justicia constitucional a efectivizar y materializar esos valores y
principios para una vida armoniosa, con equidad, igualdad de oportunidades y dignidad, entre
otros valores, en los que se sustenta el Estado Plurinacional y que son parte de la sociedad
plural.

III.2. El juez natural en su elemento competencia y su protección vía amparo


constitucional

Precisada la naturaleza y alcance del amparo constitucional, corresponde referirse al debido


proceso y la garantía de la competencia, a objeto de determinar si la misma corresponde ser
tutelada vía la presente acción de defensa.

En ese entendido, primero se debe señalar que la competencia implica la capacidad legal de
asumir y ejecutar decisiones generadoras de consecuencias y efectos jurídico-administrativos, lo
que nos deriva al debido proceso y sus distintos elementos que se materializan a través de las
actuaciones procesales que se desarrollan en un juicio o en un proceso administrativo. Al
respecto, es pertinente señalar los razonamientos asumidos en la SC 0099/2010-R de 10 de
mayo, que refiriéndose al juez natural en su elemento competencia, establece la delimitación del
ámbito de protección de la acción de amparo constitucional y del recurso directo de nulidad,
señalando:

“El juez natural, constituye una garantía constitucional con incidencia en el campo tanto
jurisdiccional como administrativo, cuyo “núcleo duro” está compuesto por tres elementos a
saber: la competencia, la imparcialidad y la independencia.

(…)

la competencia como medida y continente de la potestad administrativa es indelegable,


inconvalidable y emana solamente de la ley y de la Constitución; entonces, la importancia que
reviste este elemento del juez natural en el Estado Social y Democrático de Derecho, hace que
el ordenamiento jurídico-constitucional boliviano le conceda un resguardo reforzado frente a
actos de quienes usurpen funciones que no les competen o contra los actos de quienes ejerzan
jurisdicción o potestad que no emane de la ley.

(…) el control de constitucionalidad al margen de su rostro preventivo o reparador, tiene tres


brazos operativos de control a saber: el primero referente al control normativo de
constitucionalidad; el segundo vinculado al control reforzado de constitucionalidad, referente a
la vigilancia y resguardo de derechos fundamentales y finalmente, el control competencial de
constitucionalidad, a través del cual se protege la garantía de competencia frente a actos
lesivos que puedan afectarla.

(…)

En mérito a lo señalado, se puede determinar que el antes recurso de amparo constitucional,


ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección eficaz y pertinente para el resguardo
del derecho al debido proceso en todos sus elementos incluido el juez natural, pero, solamente
en sus elementos imparcialidad e independencia, en ese sentido, debe precisarse que la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 360
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

protección del tercer componente del juez natural; el referente a la competencia en cuanto a
los supuestos de hecho antes descritos; es decir, usurpación de funciones que no estén
mencionadas por ley, ejercicio de potestad administrativa que no emane de la ley,
resoluciones judiciales emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley o
pronunciadas por autoridad jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus funciones o que
hubieren cesado en las mismas; se encuentran resguardados específicamente por el recurso
directo de nulidad” (las negrillas son agregadas).

De la jurisprudencia glosada, se extrae que el ámbito de protección del amparo constitucional en


cuanto al resguardo de derechos emergentes del juez natural, se centra en los elementos de
imparcialidad e independencia, sin que sea posible la valoración y consideración del elemento
competencia, toda vez que el mismo se encuentra en el ámbito de control de constitucionalidad,
que tiene al recurso directo de nulidad como medio de resguardo de la garantía contenida en el
art. 122 de la CPE, referida a que son nulos los actos de las personas que usurpen funciones que
nos les competen, así como los actos de las que ejercen jurisdicción o potestad que no emane de
la ley, es decir, que la garantía citada se refiere a la nulidad de todas las actuaciones realizadas
sin competencia.

Dentro de ese contexto legal, es evidente que el amparo constitucional no es la vía idónea para
restituir la garantía prevista en el art. 122 de la CPE, dado que vía control normativo existe un
recurso específico e idóneo para ello, que conforme a su naturaleza y alcance revisa todas las
actuaciones realizadas sin competencia, sin distinción del hecho generador de las mismas. Ello
implica, que no puede desnaturalizarse la actuación del juez natural en su elemento competencia,
interponiendo un amparo constitucional alegando vulneraciones al derecho al juez natural y la
garantía descrita, pues dicha situación hace que la presente acción sea manifiestamente
improcedente, -se reitera- porque no es el medio ni vía idónea para conocer y resolver las
cuestiones planteadas sobre competencia.

III.3. El caso en análisis

De la revisión de antecedentes que cursan en obrados, se evidencia que el problema jurídico


planteado a través de la presente acción tutelar, se centra en la competencia de la Jueza Quinta
de Partido en lo Civil y Comercial del Distrito Judicial de Chuquisaca, que admitió y declaró
legal un recurso de compulsa formulado por el Gobierno Municipal, como consecuencia del
rechazo por parte del Jefe Departamental de Trabajo a un recurso de anulación contra el Laudo
Arbitral que aprobó el pliego de reclamaciones a favor de los trabajadores municipales, lo que
derivó que tanto el Tribunal de alzada como el Tribunal colegiado incurrieran en errores
procesales, con el consiguiente perjuicio para los trabajadores porque no se pudo ejecutar el
Laudo Arbitral.

Por lo referido precedentemente, se infiere que el accionante impugna y pretende que mediante
esta acción tutelar de defensa, se revise y determine la competencia de las autoridades
demandadas respecto a la ejecución de un laudo arbitral laboral que fue favorable a sus
representados, confirmándose esa pretensión con el petitorio contenido en la demanda, en el que
se solicita la nulidad de todas las resoluciones asumidas por los demandados, invocando para
ello, entre otros derechos, el debido proceso en su elemento del juez natural, recalcando siempre
en el contenido de su memorial que los demandados actuaron sin competencia.

Al respecto, conforme se ha establecido en el Fundamento Jurídico III.2 del presente fallo, el


ámbito de protección del debido proceso en su componente juez natural vía amparo
constitucional, por su naturaleza misma alcanza únicamente a los elementos imparcialidad e
independencia, y no así a la competencia que corresponde a otro recurso constitucional, como lo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 361
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

es el recurso directo de nulidad que tiene por objeto resguardar la garantía de la competencia en
cuanto a situaciones de usurpación de funciones, ejercicio de potestad administrativa que no
emane de la ley, resoluciones emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley, entre
otras.

En aplicación de los razonamientos precedentes, la presente acción de amparo constitucional es


improcedente, por cuanto el principal argumento alegado por el accionante, radica en una
presunta actuación sin competencia de las autoridades demandadas, dado que se trataba de la
ejecución de un laudo arbitral laboral, por tanto no podían aplicar la Ley de Arbitraje y
Conciliación al tratarse de un conflicto colectivo amparado en la Ley General del Trabajo,
demanda que no puede ser conocida y menos resuelta a través del amparo constitucional al no
ser el medio idóneo para dilucidar esa situación, pues conforme se ha expresado ampliamente el
recurso directo de nulidad se constituye en el medio no sólo idóneo, sino también eficaz para el
resguardo de la competencia como garantía prevista por la Ley Fundamental.

En ese orden, un entendimiento contrario al señalado, implicaría desconocer la verdadera


naturaleza jurídica, alcance y objeto del recurso directo de nulidad, creando una disfunción
procesal al utilizar alternativamente acciones y recursos constitucionales, sin considerar la
pertinencia de los mismos. Por los razonamientos y fundamentos expuestos, corresponde
denegar la tutela solicitada.

III.4. Modulación de los efectos de la presente Sentencia Constitucional con relación al


caso analizado

No obstante lo expresado, analizando los casos concretos es posible modular los efectos de las
Sentencias, conforme lo dispone el art. 48.4 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC), que al
referirse a la forma y contenido de la sentencia, alude que: “La parte resolutiva en la que se
pronunciará el fallo sobre el fondo del recurso o demanda, en la forma prevista para cada caso,
su dimensionamiento en el tiempo y los efectos sobre lo resuelto…”.

En ese entendido, si bien este Tribunal, por los argumentos expuestos, llega a la conclusión que
los representados del accionante, sufrieron la conculcación de sus derechos y garantías
constitucionales, al no ejecutarse el Laudo Arbitral laboral; no es menos evidente que este
Tribunal no puede desconocer todos aquellos actos que como emergencia de haberse concedido
la tutela solicitada se hubieren realizado, a efectos de la restitución del bono de antigüedad y el
incentivo municipal; tomando en cuenta, además, que a la fecha han transcurrido casi tres años
desde que el Tribunal de garantías, concedió la tutela.

III.5. Otras consideraciones

No obstante lo resuelto en el presente fallo, no se puede soslayar lo señalado en el memorial de


demanda de la acción de amparo constitucional, presentada el 9 de marzo de 2009, en vigencia
de la actual Constitución Política del Estado; sin embargo, el accionante describió los derechos
vulnerados insertos en la Constitución Política del Estado abrogada.

En conclusión, si bien el accionante, debió referirse a la Constitución Política del Estado en


actual vigencia, no pueden ser afectados los derechos adquiridos y consolidados como efectos de
haberse concedido la acción impetrada, y en aplicación del principio pro homine, que fue
desarrollado ampliamente por el Tribunal Constitucional, y reconocido en los arts. 13.IV y 256
de la CPE, que prevé la interpretación mas favorable para los derechos humanos, y que la
Norma Fundamental los protege de manera más amplia, dotándoles de mayores garantías, en
consecuencia, la errónea invocación de preceptos constitucionales no vigentes, no incide en el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 362
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

presente caso, por las razones ya expuestas, y considerando además que el contenido esencial de
los derechos no varía y al contrario está ampliado y con más garantías para su materialización en
el nuevo orden constitucional.
Por lo expuesto precedentemente, la situación planteada no se encuentra dentro las previsiones y
alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías al haber
concedido la tutela solicitada, no efectuó una correcta compulsa de los antecedentes procesales,
ni aplicó correctamente los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:

1º REVOCAR la Resolución de 25 de marzo de 2009, cursante a fs. 149 a 154 vta., dictada por
los Conjueces de la Corte Superior -ahora Tribunal Departamental de Justicia- de Chuquisaca, y
en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración de que no se ingresó al
análisis de fondo de la problemática planteada.

2º Conforme lo referido en el Fundamento Jurídico III.4 de la presente Sentencia, y al amparo


del art. 48.4 de la LTC, y debido al tiempo transcurrido desde la interposición de la acción hasta
la presente revisión, se dimensiona los efectos de la misma, dejando subsistentes los actos
cumplidos como resultado de la concesión de tutela por el Tribunal de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la gaceta constitucional plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi..-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0047/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20112-41-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 60/2009 de 7 de julio, cursante a fs. 99 a 102, pronunciada dentro la


acción de amparo constitucional, interpuesta por Ricardo Adolfo Paz Birbuet en
representación de “ZAP Fashion Republic S.R.L.” contra Jorge Ramiro Tapia Sainz,
Ministro de Salud y Deportes; y, Marco Antonio Cárdenas, Director Ejecutivo a.i. de
Lotería Nacional de Beneficencia y Salubridad (LONABOL).

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 363
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Por memorial presentado el 22 de junio de 2009, cursante de fs. 57 a 73, se tiene conocimiento
de los siguientes argumentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante manifiesta que la empresa que representa, por promoción empresarial efectuó un
sorteo en enero de 2008, que conforme a sus lineamientos, estaba destinado únicamente a
clientes registrados en su base de datos y a personas que realizaron compras por un mínimo de
Bs200.- (doscientos bolivianos 00/100) desde el 4 de diciembre de 2007 al 20 de enero de 2008.
Señala que efectuado el sorteo ante Notaria de Fe Publica, resultó ganadora Cecilia Muñoz
Saldías, quien no se encontraba registrada como cliente -requisito indispensable-, ni efectuó
ninguna compra en el periodo indicado, comunicándole que no podía ser acreedora del premio
mayor; por lo que se apersonó Caster Gálvez Calle, arguyendo que en atención de su compra,
sea la Sra. Muñoz quien reciba el premio, y solicitó la entrega del mismo, lo que no fue posible
al no estar en las listas de ganadores; situación por la que dichas personas presentaron denuncia
a LONABOL, misma que nunca les fue notificada, en base a la cual se emitió la Resolución
Administrativa (RA) 072/2008 de 3 de julio, conminando la entrega del premio a Cecilia Muñoz
Saldías; ante lo cual presentaron recurso de revocatoria, resuelto por RA 006/08 de 28 de agosto,
que no sólo agravó la situación de la empresa que representa, sino impuso una doble sanción,
ordenando que se beneficie no sólo a Cecilia Muñoz, que no cumple con las condiciones, sino
además a Caster Gálvez Calle, quien no fue ganador de ningún premio; Resolución contra la que
interpuso recurso jerárquico, dictándose la Resolución Jerárquica 003/2009 de 3 de abril, fuera
del plazo previsto en los arts. 17 y 67 de la Ley 2341 de 23 de abril de 2002, contraviniendo el
art. 63 de la misma Ley, determinando la realización de un nuevo concurso donde se habilite a
Cecilia Muñoz, imponiendo el pago de una multa del 20 % a su favor.

Alega que en las Resoluciones mencionadas, se tiene una evidencia de una extraña
parcialización a favor de una persona que no cumplió con las bases del concurso y perjudicó la
entrega del premio mayor a los clientes de la empresa, por cuanto la RA 072/08 de LONABOL
fue dictada sin antes notificar la denuncia formulada contra “Zap Fashión Republic S.R.L.”, con
lo que la colocaron en estado de indefensión. Por otro lado, dichas autoridades carecen de
competencia, lo que da lugar a la nulidad del acto conforme a los arts. 35 incs. a), c) y d) de la
Ley 2341 y 122 de la Constitución Política del Estado (CPE), aspecto denunciado en el recurso
de revocatoria, sin merecer pronunciamiento, lesionando el debido proceso de la empresa,
particularmente el referido al juez natural independiente e imparcial, Resolución que se tornó
aún más ilegal cuando se basó en el reglamento para la otorgación de licencias a promociones
empresariales, situación que no se encuentra como una facultad otorgada a la Lotería en la Ley
583 de 23 de abril de 1928, ni del Decreto Supremo (DS) 24446 de 20 de diciembre de 1996,
que regula los juegos tradicionales de Lotería, no así los realizados como promoción
empresarial.

Indica que la RA 006/08, también fue suscrita por las mismas autoridades carentes de
competencia, omitiendo pronunciarse sobre los extremos denunciados en el recurso de
revocatoria, incurriendo en vulneración de los derechos a la defensa, al debido proceso y
“seguridad jurídica” e incumpliendo los principios de congruencia y pertinencia, ya que sus
conclusiones no guardan relación con la realidad de los hechos, llegando a establecer que Caster
Gálvez y Cecilia Muñoz eran pareja, a pesar de no existir prueba de ese extremo.

Señala también que, la Resolución Jerárquica 003/2009, pronunciada por el Ministro de Salud y
Deportes, fue emitida fuera de plazo, agravando la sanción impuesta por las dos anteriores,
imponiendo una no prevista en la normativa vigente, fundándose en informes que no fueron de
su conocimiento, lo que hace a la nulidad del indicado acto administrativo.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 364
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, estima vulnerados los derechos de la empresa que representa al debido proceso,
defensa y “seguridad jurídica”, citando al efecto los arts. 14.IV, 115.II, 116.II, 117.II, 119.II, y
122 de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción planteada y en consecuencia se anulen las RRAA 072/08 y 006/08,
ambas del 2008 dictadas por LONABOL; y la Resolución Jerárquica 003/2009 emitida por el
Ministro de Salud y Deportes, disponiendo la nulidad de obrados hasta la denuncia efectuada
por Cecilia Muñoz Saldías, para que la empresa que representa, asuma defensa, con
determinación de daños, perjuicios y costas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 7 de julio de 2009, según consta en el acta cursante de fs. 93 a
98 de obrados, se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante reiteró el contenido del memorial de la acción de amparo constitucional y


ampliando señaló que: a) La solicitud de fotocopias legalizadas y posterior regularización del
concurso, no implica que se haya asumido automáticamente la notificación de una denuncia, ya
que son solicitudes diferentes y para fusionar ambos trámites debió emitirse una resolución
administrativa conforme al art. 44 de la Ley 2341.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

La abogada y apoderada del Director Ejecutivo de la LONABOL, en audiencia manifestó: 1) El


DS 24446, faculta a Lotería Nacional ejercer control y fiscalización de promociones
empresariales, no de investigación; estableciendo los requisitos y la forma en que se debe iniciar
un proceso de promoción empresarial, teniendo una participación del 15% de los ingresos; 2) La
empresa “Zap Fashion Republic S.R.L.”, pretendió regularizar su concurso cuando ya había
efectuado el sorteo, señalando que el número ganador del automóvil “Fox 0 Km”, correspondía
a Cecilia Muñoz, información en la que se basó la Lotería; 3) Si Caster Gálvez y Cecilia Muñoz,
no estaban en el concurso, no deberían haber salido en la base de datos de la empresa, que fue la
que generó el problema; y, 4) La Lotería sólo hizo cumplir el Reglamento específico de
promociones empresariales, donde las resoluciones sólo son de naturaleza conminatoria. En
audiencia aclararon que la revocatoria no agravó la situación de la empresa puesto que Caster
Gálvez como cliente de la empresa y tenedor del ticket, estaba en mancomunidad con Cecilia
Muñoz de quien era pareja, y de acuerdo al DS 24446, el premio debió entregarse al simple
tenedor del ticket.

El Director General de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Salud y Deportes, en representación


del Ministro demandado, presentó informe escrito cursante a fs. 83 y vta., en el que señaló: i)
Dentro del proceso administrativo seguido a Lotería Nacional por la empresa “ZAP Fashion
Republic S.R.L.”, el Ministro de Salud y Deportes de acuerdo a Ley, resolvió el recurso
jerárquico por Resolución 003/2009; ii) Dentro de sus determinaciones se encuentra revocar la
RA 006/08, emitida por el Director Ejecutivo de la LONABOL, disponiendo que la empresa
referida compense a Cecilia Muñoz con el 20% del precio del automóvil establecido en el
contrato de compraventa, así como efectúe nuevo sorteo para entregar el automóvil ofrecido,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 365
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

debiendo considerar a Cecilia Muñoz Saldías como habilitada para participar del mismo; iii)
Según el art. 123 del DS 29894 de 7 de febrero de 2009, el Director General de Asuntos
Jurídicos es el encargado de proyectar resoluciones de los recursos jerárquicos en el Ministerio y
emitir informe, en el caso del proyecto suscrito por el Ministro de Salud y Deportes, Ramiro
Tapia Sainz, fue proyectado por el ex Director General de Asuntos Jurídicos, que en el parágrafo
III.1. refiere sobre el incidente de nulidad por actividad procesal defectuosa; y, iv) La facultad
de valoración de la prueba, según la jurisprudencia constitucional, corresponde privativamente a
los órganos jurisdiccionales o las instancias administrativas, por lo que en uso de esa facultad, el
Director Jurídico emitió el proyecto de resolución, que establece actos acordes con el
procedimiento disciplinario y sancionador.

I.2.3. Intervención de los Terceros Interesados

El abogado de los terceros interesados en audiencia manifestó que los sorteos están sujetos a
ciertos reglamentos, los cuales dejarían de tener valor jurídico y respeto a la opinión pública, si
es que estarían sujetos a que estos sean “antojadizos”.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Tercera de la Corte Superior del Distrito Judicial ahora -Tribunal Departamental
de Justicia de La Paz-, constituida en Tribunal de garantías, por Resolución 60/2009 de 7 de
julio, cursante de fs. 99 a 102, concedió la tutela solicitada, disponiendo la nulidad de la
Resolución Jerárquica 003/2009 de 3 de abril pronunciada por el Ministro de Salud y Deportes,
y las RRAA 006/08 y 072/08, hasta que se proceda a notificar con la denuncia o queja que
hubiera formulado Cecilia Muñoz contra la empresa “Zap Fashion Republic S.R.L.”, en base a
los siguientes fundamentos: a) La denuncia presentada ante Lotería Nacional por Cecilia Muñoz
y Caster Gálvez Calle, debió ser notificada expresamente a la empresa denunciada, a efecto de
que asuma su defensa conforme a derecho, en cuya omisión, Lotería Nacional pronunció la RA
072/08, disponiendo la entrega de dicho premio a Cecilia Muñoz Saldías, sin que hubiera
comprado ninguna prenda personal; b) Interpuesto el recurso de revocatoria, Lotería Nacional
emitió la RA 006/08, por la que de forma incongruente, falla disponiendo sean acreedores del
premio Cecilia Muñoz y Caster Gálvez Calle, cuando dichas personas no son pareja, no viven
juntos, además de que el Sr. Gálvez no ganó el premio; extremos que al interponer la denuncia
debían dilucidarse e investigarse lo que fue omitido por los demandados; c) Interpuesto el
recurso jerárquico, el Ministro de Salud y Deportes emitió la Resolución 003/2009, que revoca
la RA 006/08 y las Resoluciones emitidas por la LONABOL, disponiendo que Cecilia Muñoz,
entre a un nuevo sorteo y perciba la compensación del 20 % del valor del premio que iba a
ganar; al respecto el art. 36.II de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), establece que
las resoluciones que emitan estas entidades se referirán a las pretensiones formuladas por el
recurrente, sin que en ningún caso pueda agravarse su situación inicial, de acuerdo al principio
de congruencia y la prohibición de la “reformatio in peius”, por cuanto las Resoluciones deberán
ser congruentes con las pretensiones formuladas por los interesados, sin que en ningún caso
pueda la administración agravar su situación inicial; d) La empresa que promocionó el sorteo,
tenía que hacer los descargos del por qué no procedió a la entrega del premio; e) No se cumplió
lo previsto en el art. 33.I de la LPA que señala que la administración pública notificará a los
interesados todas las resoluciones y actos administrativos que afecten a sus derechos subjetivos
o intereses legítimos, situación no considerada por ninguna de las autoridades demandadas
respecto al reclamo permanente a la falta de notificación con la denuncia; f) Respecto a la
presentación espontánea del interesado o de su representante, si bien Ricardo Adolfo Paz, hizo
conocer la legalización de la promoción empresarial y del sorteo del automóvil y otros premios
menores; sin embargo, ello no significa en ningún momento que se da por legalmente notificado
con la denuncia formulada, vulnerándose el derecho al debido proceso y la defensa; y, g) El art.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 366
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

124 inc. b) de la LPA, refiere que la resolución jerárquica debe declarar aceptando,
convalidando el acto viciado, si es competente para ello, o revocándolo total o parcialmente, si
no tiene competencia para corregir sus vicios; sin embargo, en dicha Resolución existe falta de
congruencia en cuanto al contenido de la misma y lo que señala la parte dispositiva, por cuanto
no se hace referencia de por qué Cecilia Muñoz Saldías se hace acreedora del 20 % del precio
del automóvil, los parámetros y en qué disposiciones se ampara, más aún si no se pueden
reformar las pretensiones contenidas tanto en el recurso de revocatoria como el recurso
jerárquico.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Se procedió al sorteo de la presente causa el 28 de febrero de 2012, por lo que la misma es


pronunciada dentro de plazo; dejando constancia que la Magistrada, Dra. Blanca Isabel Alarcón
Yampasi, presentó excusa, la cual fue declarada legal mediante Acuerdo Jurisdiccional
0006/2012-CA/SL.

I.4. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo
siguiente:

II.1. Por nota presentada el 30 de enero de 2008, el Gerente General de “Zap Fashión Republic
S.R.L.”, solicitó a la Directora Ejecutiva de LONABOL la legalización de la promoción
empresarial en la que sortearon un automóvil Fox “0 Km” y otros premios menores, haciendo
notar que tenían dos casos donde el beneficiario no figuraba en su base de datos, ni como
compradores de su tienda (fs. 12); mediante nota de 15 de febrero del mismo año, hace llegar el
listado de clientes registrados del 4 de diciembre de 2007 al 20 de enero de 2008, a efectos del
sorteo realizado el 21 de enero del mismo año (fs. 14).

II.2. Ante la denuncia interpuesta por Cecilia Muñoz Saldias y Caster Gálvez Calle, el 22 de
enero de 2008, mediante RA 072/08, suscrita por el Director Ejecutivo a.i. y el Director Jurídico,
ambos de la LONABOL, resolvieron que la empresa “Zap Fashion Republic S.R.L.”, proceda a
la entrega del premio mayor ofrecido en la promoción empresarial, en el sorteo efectuado el 21
de enero de 2008, a la acreedora de ticket “9669” correspondiente a Cecilia Muñoz Saldias, por
encontrarse habilitada conforme al acta de sorteo, mismo que fue realizado en presencia de
Notaria de Fe Pública (fs. 21 a 23); por lo que el representante legal de “Zap Fashión Republic
S.R.L.” el 1 de agosto de 2008, interpuso recurso de revocatoria contra la Resolución
Administrativa 072/08, alegando que no fueron notificados con la denuncia presentada por la
parte contraria, a efecto de presentar sus descargos, lo que lesiona sus derechos a la defensa, al
debido proceso y a la publicidad; así como también que el Director Jurídico y el Director
Ejecutivo a.i., quienes dictaron la Resolución impugnada 072/08, no tendrían facultad para
hacerlo, salvo que cuenten con resolución ministerial, conforme al art. 18 del DS 24446 (fs. 24 a
28 vta.).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 367
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.3. Mediante RA 006/08, el Director Ejecutivo a.i. de LONABOL, resuelve rechazar el recurso
de revocatoria y confirmar en todas sus partes el acto administrativo recurrido, con la
modificación de que los acreedores y poseedores del ticket 9669 son sus titulares Caster Gálvez
Calle y Cecilia Muñoz Saldias en forma mancomunada a efectos del premio mayor. (fs. 29 a 34).

II.4. A partir del Acta de entrega de premios de “Zap Fashión Republic S.R.L.”, suscrita por
Notaria de Fe Pública, se evidencia que el Gerente General de dicha empresa Ricardo Adolfo
Paz Birbuet, dio una explicación sobre el cupón ganador del Automóvil Fox “0 Km”, señalando
que el ticket “9669” correspondiente a Cecilia Muñoz Saldías, quién no estaría registrada en la
base de datos de la empresa como requisito principal para ser acreedora al premio mayor (fs. 47
vta.).

II.5. El 15 de septiembre de 2008, el representante legal de la empresa “Zap Fashión Republic


S.R.L.”, Ricardo Adolfo Paz Birbuet, interpuso recurso jerárquico contra la Resolución 006/08,
y ratificando in extenso el recurso de revocatoria, hizo énfasis en la falta de análisis de los
antecedentes del caso, puesto que hace referencia a que “en el segundo párrafo del primer
considerando señala expresamente la existencia de una denuncia planteada por la Dra. Cecilia
Muñoz Saldias y Caster Gálvez Calle, empero en ningún extremo indica haber notificado con
dicha denuncia a la empresa” violentado su derecho a la defensa (fs. 35 a 38).

II.6. Por memorial de 5 de febrero de 2009, dirigido al Ministro de Salud y Deportes el


representante legal de la empresa “Zap Fashión Republic S.R.L.”, solicito resolución por
vencimiento de plazo, alegando que el término para sustanciar y resolver el recurso jerárquico
era de noventa días, plazo que se debe computar desde la interposición del recurso (fs. 40 y vta.).

II.7. Mediante Resolución Jerárquica 003/2009 de 3 de abril, Ramiro Tapia Sainz, Ministro de
Salud y Deportes resuelve revocar la RA 006/08, emitida por el Director Ejecutivo de la Lotería
Nacional de Beneficencia y Salubridad; y determina que la empresa “Zap Fashion Republic
S.R.L.”, compense a Cecilia Muñoz Saldías con el 20% del precio del automóvil, así como que
dicha empresa realice un nuevo sorteo para entregar el automóvil ofrecido, debiendo habilitar a
Cecilia Muñoz Saldías para participar del mismo (fs. 41 a 45).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante por la empresa que representa, denuncia la vulneración de los derechos a la


“seguridad jurídica”, al debido proceso y a la defensa, debido a que las RRAA 072/2008 y
006/2008 pronunciadas por LONABOL, fueron emitidas sin competencia, lo que hace a su
nulidad, al vulnerar el debido proceso en cuanto a la garantía de un juez independiente,
competente e imparcial; así también señala que nunca fueron notificados con la denuncia
formulada por Cecilia Muñoz Saldías, ni con la apertura del proceso, lo que les causó
indefensión; y, que las autoridades de la Lotería Nacional como el Ministerio de Salud y
Deportes, en franca parcialización con la denunciante, pretenden se la premie cuando no
cumplió las bases del concurso y perjudicó la entrega del premio mayor. En consecuencia,
corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la
tutela solicitada.

III.1.La acción de amparo constitucional y su naturaleza jurídica

El art. 128 de la CPE ha previsto la acción de amparo constitucional, contra todos los actos u
omisiones ilegales o indebidos cometidos por servidores públicos o persona particular o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y las leyes, constituyendo una garantía jurisdiccional extraordinaria
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 368
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

mediante la cual el accionante hace posible la restitución de sus derechos y garantías


fundamentales restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión, obteniendo la
tutela y la reposición en el ejercicio de los mismos.

Po su parte el art. 129.I de la Ley Fundamental, prevé que esta acción de defensa se interpondrá
por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad
correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente,
siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados.

Se debe dejar claramente establecido que, respecto a su naturaleza subsidiaria, la acción de


amparo constitucional no es un instrumento alternativo o sustitutivo de las acciones ordinarias
que la Constitución y la ley asignan a las distintas jurisdicciones, según su especialidad, para la
protección de los derechos que se consideran vulnerados, sino mas bien, puede únicamente
instaurarse cuando el lesionado no tiene otro medio de defensa, por lo que cuando hubiesen
otros recursos a su alcance, los mismos deben ser utilizados primero y sólo se concederá la tutela
de dicha acción constitucional cuando aquellos resulten ineficaces para la defensa de los
derechos, o cuando se lo conceda como protección inmediata para evitar un daño irreparable.

III.2.Delimitación de ámbitos de protección de la acción de amparo constitucional y el


recurso directo de nulidad

El art. 122 de la CPE estable: “Son nulos los actos de las personas que usurpen funciones que no
les competen, así como los actos de las que ejercen jurisdicción o potestad que no emane de la
ley”.

Contexto constitucional establecido por el constituyente mediante el cual un acto o resolución


emitido por cualquier autoridad, sea judicial o administrativa, es pasible de nulidad cuando no
está enmarcada dentro de la competencia prevista por ley o cuando dicha facultad precluye al
concluir una etapa dentro del cualquier proceso, constituyéndose por ello en un mecanismo de
defensa del derecho fundamental relativo al debido proceso, en cuanto a su elemento del juez
natural competente, pero solamente relacionado con la usurpación de funciones y potestad no
prevista por ley, emisión de resoluciones judiciales sin jurisdicción o pronunciada por
autoridad suspendida o cesada en sus funciones.

Al respecto, el Tribunal Constitucional a partir del entendimiento desarrollado en la SC


0099/2010-R de 10 de mayo, a través de la cual se moduló los alcances de protección señalados
en la SC 0585/2005-R de 31 de mayo, ante la vulneración al juez natural en su elemento
competencia, fijando ámbitos de protección distintos de la acción de amparo constitucional y del
recurso directo de nulidad, dejó establecido que para el control de constitucionalidad vinculado
directamente a la competencia, concretamente la garantía inserta en el art 122 de la CPE, está
previsto el recurso directo de nulidad, al señalar: “En la esfera jurisdiccional y en concordancia
con el art. 79.II de la LTC, existen también tres supuestos claros que forman el 'núcleo esencial'
de esta garantía, siendo por tanto nulas las decisiones emitidas por autoridades judiciales en
los siguientes supuestos: i) Resoluciones emitidas en ejercicio de jurisdicción o potestad que no
emane de la Ley; ii) Las resoluciones o actos pronunciados por autoridad que usurpe funciones
que no le compete; iii) Resoluciones pronunciadas por autoridad jurisdiccional que hubiere
cesado en sus funciones.

En mérito a lo señalado, se puede determinar que el antes recurso de amparo constitucional,


ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección eficaz y pertinente para el resguardo
del derecho al debido proceso en todos sus elementos incluido el juez natural, pero, solamente
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 369
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

en sus elementos imparcialidad e independencia, en ese sentido, debe precisarse que la


protección del tercer componente del juez natural; el referente a la competencia en cuanto a
los supuestos de hecho antes descritos; es decir, usurpación de funciones que no estén
mencionadas por ley, ejercicio de potestad administrativa que no emane de la ley,
resoluciones judiciales emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley o
pronunciadas por autoridad jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus funciones o que
hubieren cesado en las mismas; se encuentran resguardados específicamente por el recurso
directo de nulidad” (las negrillas son agregadas).

III.3. Análisis del caso concreto

Del estudio de los antecedentes de la presente acción de amparo constitucional se tiene que,
interpuesta la denuncia por Cecilia Muñoz Saldías y Caster Gálvez Calle contra la empresa
accionante, por negativa de hacerles entrega del automóvil “O Km” como premio mayor dentro
del sorteo efectuado el 21 de enero de 2008, señalando que no cumplirían con las bases del
concurso; LONABOL emitió la RA 072/08, suscrita por el Director Ejecutivo a.i. y el Director
Jurídico, disponiendo que la empresa “Zap Fashion Republic S.R.L.”, a través de su
representante legal, proceda a la entrega del premio mayor ofrecido en la promoción
empresarial, a la acreedora de ticket “9669”; es decir, Cecilia Muñoz Saldias, por encontrarse
supuestamente habilitada conforme al acta del sorteo. Impugnada dicha Resolución, mediante
recurso de revocatoria, por RA 006/08, suscrita por el Director Ejecutivo a.i. y Director Jurídico
y Fiscalización de la LONABOL, el mismo fue rechazado confirmando en todas sus partes el
acto administrativo recurrido, ante lo cual el 15 de septiembre de 2008, el representante legal de
la empresa “Zap Fashión Republic S.R.L.”, Ricardo Adolfo Paz Birbuet, interpuso Recurso
Jerárquico contra la citada Resolución 006/08, ratificando in extenso el recurso de revocatoria;
Resoluciones Administrativas, que a decir del accionante, hubieran sido emitidas incumpliendo
el art. 28 incs. a), d) y f) de la LPA, por cuanto el Director Ejecutivo a.i. y el Director Jurídico,
conforme a derecho, no tendrían facultad alguna para emitir ninguna Resolución, conforme
establece el art. 18 del DS 24446, que señala que es el Presidente Ejecutivo quien goza de
facultades de representación de la Lotería Nacional, más aún si en dichas Resoluciones no se
acreditó su legitimación, ni se señaló la norma o instrumento legal que les otorgaría facultades
expresas de resolver el recurso de revocatoria, usurpando funciones, evidenciándose por ello
falta de competencia, extremos que, según el accionante, implicarían la nulidad del acto,
conforme los arts. 35 inc. a) de la LPA y 122 de la CPE.

De lo relacionado se evidencia que los actos lesivos denunciados por el ahora accionante están
circunscritos a supuestos actos emitidos por el Director Ejecutivo a.i. y el Director Jurídico de la
Lotería Nacional de Beneficencia y Salubridad, mediante Resoluciones que estuvieran
cuestionadas en su legalidad por falta de competencia, solicitando inclusive la nulidad de las
mismas a través de la acción de amparo constitucional; aspecto que no puede ser dilucidado
mediante la presente acción tutelar, sino a través del recurso directo de nulidad previsto en el art.
122 de la CPE, por cuanto la acción de amparo constitucional, no constituye un mecanismo
idóneo para revertir los supuestos actos ilegales cometidos por autoridades administrativas
o judiciales que actúen sin competencia dentro de cualquier proceso, cuando se encuentre
cuestionado su actuar ante una supuesta usurpación de funciones no prevista por ley o el
ejercicio de potestad administrativa que no emane de la misma; situación que en el caso
presente concurre, siendo aspectos que deben ser resguardados por el recurso directo de
nulidad, por lo que corresponde aplicable la jurisprudencia citada en el Fundamento Jurídico
III.2 de esta Sentencia.

Consiguientemente, corresponde denegar la tutela solicitada, sin ingresar al análisis de fondo de


la problemática planteada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 370
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Por lo expresado precedentemente, la situación planteada no se encuentra dentro las previsiones


y alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías, al haber
concedido la tutela, no efectuó una correcta compulsa de los antecedentes procesales, ni aplicó
correctamente los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución 60/2009 de 7 de julio, cursante de fs. 99 a 102, dictada por Sala
Penal Tercera de la Corte Superior del Distrito Judicial ahora -Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz-; y, en consecuencia, DENEGAR el amparo solicitado, con la aclaración de
que no se ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

No interviene la Magistrada, Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi, por excusa declarada legal.

Fdo. Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.


Dra. Carmen Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MARZO MARZO MARZO

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0048/2012


Sucre, 26 de marzo de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19710-40-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución SCII-213/2011 de 11 de junio, cursante de fs. 514 a 521, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Jesús Walter Vedia Cárdenas y
Sergio Abrahan Imaná Canedo, en representación legal de Edson Sydney Almanza
Mercado contra Mario Uribe Meléndres, Fiscal General de la “República”, Héctor José
Tapia Cortez, miembro del Tribunal Nacional de Disciplina, Gonzalo Flores Céspedes,
Inspector General y Julio César Sandoval, Fiscal Investigador de la Inspectoría General,
todos del Ministerio Público; Rodolfo Fuentes Borda, Fiscal de Distrito de Oruro.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 18 de abril de 2009, cursante de fs. 122 a 133 y vta. de obrados, los
accionantes exponen los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 371


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Cuando su representado se encontraba en ejercicio de funciones como Fiscal de Materia de


Cochabamba, el hijo del querellante, dentro del proceso penal seguido por el presunto delito de
homicidio y lesiones graves y gravísimas en accidentes de tránsito, presentó denuncia contra su
mandante y otro Fiscal, por la supuesta comisión de las faltas muy graves y graves contenidas en
el art. 107.4, 7 y 11; y art. 108.4, 5, 6, 7, 8, 14 y 15 de la Ley Orgánica del Ministerio Público
(LOMP) pidiendo su destitución, posteriormente su representado dejó de ejercer como Fiscal;
empero el 18 de octubre de 2007, es decir, dos meses y tres días después de que su mandante fue
alejado de su cargo, el Inspector General del Ministerio Público admitió la denuncia y dispuso la
apertura de investigación en su contra, lo que implica que la demanda fue admitida cuando su
mandante había cesado en sus funciones como Fiscal y se encontraba como alumno del curso de
formación inicial del Instituto de Capacitación del Ministerio Público, notificándosele con la
referida admisión el 8 de noviembre de 2007, para luego emitir el Fiscal investigador Informe
Conclusivo el 10 de diciembre del mismo año; empero, su representado fue notificado con el
citado Informe Conclusivo el 14 de noviembre de ese año, es decir, un mes antes.

Señalan que el 11 de enero de 2008, el Inspector General del Ministerio Público, dictó
Resolución Conclusiva 005/2008 disponiendo el enjuiciamiento de su mandante por las faltas
señaladas y la remisión de antecedentes a la Fiscalía de Distrito de Cochabamba, a objeto de
iniciar las investigaciones en materia penal, Resolución que se notificó el 28 de enero de 2008.

El 22 de febrero del mismo año y luego de la excusa del Fiscal de Distrito de Cochabamba, se
derivó y admitió la causa en la Fiscalía de Distrito de Oruro, señalándose audiencia preliminar el
4 de marzo de 2008, en la que se planteó como incidente, que su representado no era funcionario
público y no ejercía como Fiscal desde antes de que se inicie el proceso y por tanto no debía ser
juzgado por ese Tribunal, pues no tenía competencia; solicitud que fue rechazada en base a una
interpretación errónea del art. 27 del Manual de Inspectoría, disponiendo la prosecución del
proceso, por lo que la defensa se reservó el derecho de apelación.

Indican que el 18 de marzo de 2008, se presentó un memorial planteando excepción de


incompetencia y extinción de denuncia por desistimiento, así como un desistimiento de parte del
denunciante. En audiencia de enjuiciamiento el 15 de mayo de ese mismo año, el Fiscal de
Distrito de Oruro ahora demandado, aceptó el desistimiento presentado por el denunciante, para
luego en la audiencia resolver la excepción de incompetencia presentada y no así la extinción de
la causa por desistimiento y al contrario por Resolución 003/2008 de 15 de mayo, el Fiscal de
Distrito de Oruro condenó a su representado por las faltas acusadas imponiéndole la sanción de
destitución definitiva del cargo, Resolución que no toma en cuenta el desistimiento, ni la
fundamentación del Inspector General en audiencia, ni los alegatos de defensa.

Ante esa situación, se interpuso apelación, que fue resuelta por el Tribunal Nacional de
Disciplina del Ministerio Público mediante Resolución de 26 de septiembre de 2008,
confirmando en todas sus partes la Resolución apelada, con el argumento de que efectuada la
fiscalización de oficio, no se encontró ninguna vulneración de normas procesales, que no existía
reclamo alguno de los abogados del apelante y tampoco apelación contra los incidentes y
excepciones.

Concluyen señalando que de los antecedentes expuestos, se evidencia que las autoridades
demandadas incurrieron en actuaciones ilegales, por cuanto: a) Respecto al Inspector General y
el Fiscal Investigador, ambos del Ministerio Público, se admitió la denuncia cuando su
representado ya no era Fiscal de Materia, lo que implica que no contaba con legitimación pasiva
para ser objeto de un proceso disciplinario, máxime si se considera que la fase preliminar no
forma parte del procedimiento disciplinario, siendo la primera fase del mismo la apertura de la
investigación, hasta que ello no acontezca no existe un proceso abierto en sí; por su parte el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 372
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

investigador sustanció un proceso administrativo disciplinario alejado del principio de


objetividad, legalidad e imparcialidad, lo que configura un abuso de poder al someter a una
persona extraña al Ministerio Público a un procesamiento disciplinario con normas propias para
Fiscales, sin considerar que estos son responsables por las faltas cometidas en el ejercicio de sus
funciones limitando la ley, la responsabilidad a los Fiscales y no así a los ex Fiscales; b) El
Fiscal de Distrito de Oruro, no consideró la situación de su mandante y al contrario determinó
que la renuncia al cargo no implica la extinción de la responsabilidad disciplinaria, aplicando
inadecuadamente el art. 27 del Manual del Régimen Disciplinario del Ministerio Público; de
otro lado, resolvió sólo la excepción de incompetencia y no así la extinción por desistimiento,
sin que exista un solo motivo que explique el rechazo de la extinción, por lo que la Resolución
carece de fundamentación y contiene el defecto de fallar ultra petita, además de ello no tomó en
cuenta los descargos, las atenuantes ni las circunstancias de adecuación de la sanción establecida
en el art. 12.4 del Manual; es decir, condena al procesado a la más grave sanción disciplinaria
sin señalar el por qué es merecedor de esa sanción, sin aplicar tampoco el principio de
proporcionalidad establecido en el art. 82 del Reglamento de Organización y Funcionamiento de
la Inspectoría General y Régimen Disciplinario del Ministerio Público; y c) El Tribunal
Nacional de Disciplina incumplió con su labor de fiscalización de oficio efectuando además
afirmaciones falsas que no condicen con lo obrado; de otro lado la Resolución dictada por ese
Tribunal, carece de fundamentación y sobretodo fallan sin competencia, ya que tampoco eran
competentes para procesar a su representado, porque éste no tenía la condición de Fiscal a
momento de iniciarse el procesamiento.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Señalan como vulnerados, los derechos de su mandante a la “seguridad jurídica”, al debido


proceso, al juez natural, a la defensa y al trabajo, consagrados en los arts. 14.I, III y IV, 46, 117.I
y 120.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se conceda la tutela y se disponga: 1) Se declaren nulas y sin valor legal siguientes
determinaciones: Resolución 145/2007 de 18 de octubre de 2007 y en consecuencia se disponga
no haber lugar a la sustanciación de la denuncia presentada contra su mandante cuando ya no era
Fiscal; la Resolución Conclusiva 005/2008, de 11 de enero, por haber sido dictada sin
competencia; la Resolución Conclusiva 003/2008 de 15 de mayo por no cumplir con la debida
fundamentación y el principio de proporcionalidad; y la Resolución de 26 de septiembre de 2008
dictada por el Tribunal Nacional de Disciplina; 2) Se ordene al Fiscal General la restitución de
Edson Almanza al cargo de Fiscal de materia III; 3) El pago de salarios devengados desde el 14
de octubre de 2008, sea con costas y calificación de daños y perjuicios, sin desmedro de las
acciones legales a que hubiere lugar.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 10 de junio de 2011, según consta en el acta cursante de fs.
508 a 513 y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, ratificó el tenor íntegro de la demanda

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 373


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Celín Saavedra Bejarano, abogado apoderado del demandado Mario Uribe Melendres, Fiscal
General de la República, presentó informe escrito (fs. 465 a 468), que fue ratificado en
audiencia, con los siguientes argumentos: i) El mismo procesado reconoce que fue denunciado
por faltas gravísimas y graves cuando se encontraba en plenas funciones de Fiscal de Materia de
Cochabamba, aspecto que mereció la investigación y proceso correspondientes, en
cumplimiento de lo dispuesto por el art. 3 de la LOMP, siendo aplicable además, lo dispuesto
por el art. 27 del Manual de Régimen Disciplinario del Ministerio Público que dispone que la
renuncia al cargo del Fiscal sometido a proceso Disciplinario, no implica la extinción de
responsabilidad disciplinaria del Fiscal que cesa, continuando el proceso disciplinario hasta su
finalización, situación que se dio en el caso en análisis, en el que el representado de los
accionantes ya se encontraba sujeto a proceso disciplinario antes de la cesación en el cargo,
máxime si se considera que la responsabilidad administrativa o disciplinaria de los servidores
públicos no se extingue con la renuncia, sino que persiste, conforme lo dispone el art. 15 del
Reglamento de la Responsabilidad por la Función Pública, aprobado por Decreto Supremo (DS)
23318-A; ii) El procedimiento disciplinario en el Ministerio Público está compuesto de cuatro
fases: de investigación, de enjuiciamiento, de impugnación y de ejecución, en consecuencia, el
procedimiento disciplinario como tal, es un todo integrado que inicia con la primera fase, la de
investigación, que en el caso en estudio estaba en curso cuando el procesado aún se
desempeñaba como Fiscal de Materia de Cochabamba; iii) El rechazo efectuado a las
excepciones e incidentes de incompetencia, extinción de la acción y denuncia y actividad
procesal defectuosa, emergen de un Auto definitivo debidamente fundamentado, en estricta
aplicación de los arts. 314 y 315 del Código de Procedimiento penal (CPP), conforme se
evidencia de la Resolución de 26 de septiembre de 2008, que en los puntos 3, 4 y 5 del sexto
considerando, efectúa una amplia fundamentación respecto a lo alegado por la parte accionante,
no siendo evidente la falta de motivación; y, iv) La citada Resolución fue notificada al
procesado, quien si consideraba que le causaba agravio o vulneraba sus derechos, debió haber
recurrido o impugnado el mismo, o por lo menos efectuar reserva de apelación, toda vez que se
trataba de un Auto definitivo; empero nunca lo hizo dejando precluir su derecho. En base a ello,
solicita se deniegue la acción interpuesta.

María Magda Gutiérrez Rojas de Fuentes, en representación legal del demandado Rodolfo
Fuentes Borda, ex Fiscal de Distrito de Oruro, presentó informe escrito (fs. 452 a 454) ratificado
en audiencia con los siguientes fundamentos: a) De la demanda presentada por la parte
accionante, se advierte que existen contradicciones, ya que primero denuncia que no se resolvió
la excepción de extinción de la causa por desistimiento, luego se contradice indicando que se
rechazaron las excepciones e incidentes de incompetencia, extinción de la acción y denuncia y
actividad procesal defectuosa, así también, el procesado admite que se resolvió la excepción de
extinción y denuncia indicando incluso el “Por Tanto” de la resolución que resuelve dicha
excepción; por otra parte, existe una confusión sobre si se planteó extinción de la causa por
desistimiento o extinción de la denuncia por desistimiento, ya que una cosa es causa y otra
distinta es denuncia; b) En conocimiento de la Resolución que rechazó el incidente respecto a
que el procesado ya no era funcionario público, la defensa efectuó reserva de apelación, “pero
no dice que apela de dicha resolución” (sic); c) El fundamento y explicación claro y concreto
para que se rechace la excepción de extinción de acción y denuncia, como la misma parte
accionante admite, es que se aceptó el desistimiento y se dispuso que el proceso prosiga a
instancia del Inspector General del Ministerio Público, es en mérito a ese antecedente que se
rechazó la excepción de extinción de acción y denuncia, toda vez que como el caso de autos se
tramitaba a instancias del Inspector General, el desistimiento del denunciante particular no
impedía la prosecución del proceso disciplinario; y d) En el caso en análisis, se ha cumplido con
la tercera parte del art. 118 de la LOMP, pues al momento de dictar la Resolución, se asignó el
valor correspondiente a cada uno de los elementos de prueba, aplicando las reglas de la sana
crítica, justificando y fundamentando adecuadamente las razones por las cuales se les otorgaba
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 374
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

determinado valor, en base a la apreciación conjunta y armónica de toda la prueba esencial


producida. Conforme a lo expuesto, solicita declarar “improcedente” la acción de amparo
constitucional.

Julio César Sandoval Sandoval, Fiscal Investigador de la Inspectoría del Ministerio Público,
mediante informe escrito (fs. 469 a 471), alegó lo siguiente: 1) En cumplimiento a lo dispuesto
por los arts. 67 y 70 parte in fine del del Reglamento de Organización y Funcionamiento de la
Inspectoría General y Régimen Disciplinario del Ministerio Público, desarrolló el proceso
investigativo contra el representado de los accionantes, acordando al cabo de la investigación la
aplicación del art. 70.2 del Reglamento antes señalado y por ende la imposición de la sanción
del art. 109.3 de la LOMP, en ese sentido no conculcó derecho alguno del procesado, habiendo
estado al contrario sus actos, enmarcados a las disposiciones jurídicas citadas; 2) La parte
accionante, no establece los fundamentos y mucho menos precisa en que consiste la vulneración
de los principios alegados, al contrario se reconoce que su autoridad actuó conforme a
procedimiento; 3) Los arts. 101, 113, 114 y siguientes de la LOMP, advierten las
responsabilidades de distinta índole que demanda el ejercicio del cargo de Fiscal de Materia y
que el proceso disciplinario se inicia de oficio y por denuncia de cualquier particular, en el
presente caso, en razón a la denuncia de Pablo Larrazabal, el Inspector General del Ministerio
Público, dictó la Resolución 145/2007, sometiendo al Fiscal denunciado a proceso disciplinario,
sin que ello comporte que únicamente se debe someter a proceso cuando se ostenta el ejercicio
del cargo de Fiscal; y, 4) La falta de competencia demandada en forma reiterada por la parte
accionante, no puede ser analizada a través de la acción de amparo constitucional, en razón a
existir para ello el recurso directo de nulidad, para demandar por esa vía la protección inmediata,
máxime si la acción de amparo constitucional protege el derecho al debido proceso en su
componente al juez natural en los elementos de imparcialidad e independencia y no cuando se
trata del elemento competencia.

Héctor José Tapia Cortez, presentó informe escrito (fs. 401 a 403), refiriendo lo siguiente: i) En
el Acta respectiva consta que se rechazó las excepciones e incidentes de incompetencia,
extinción de la acción y denuncia, así como de la actividad procesal defectuosa; con la
Resolución de 15 de mayo de 2008 que resuelve dichas excepciones e incidentes, se notificó en
audiencia al haber sido dictada en forma oral, conforme lo establece el art. 160 del CPP, no
siendo requisito para la validez de la notificación, la entrega de cedulón o copia de la resolución,
además que dichas actuaciones no fueron reclamadas en apelación; ii) El desistimiento de parte
no extingue el proceso disciplinario, sólo genera la reparación de daños entre partes, pero de
ninguna manera desnaturaliza los elementos constitutivos de las faltas graves y muy graves; iii)
Todos y cada uno de los puntos de apelación, fueron resueltos en las conclusiones que contiene
el último considerando; y, iv) Finalmente sobre la falta de competencia, dicha situación no es
evidente, y en caso de considerarse así, el amparo constitucional no es la vía, sino que debió
reclamarse esa situación a través del recurso directo de nulidad, conforme lo determinan los arts.
79.I, 80 y 81 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC).

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Chuquisaca, constituida en Tribunal de garantías, mediante Resolución SCII-
213/2011, cursante de fs. 514 a 521, denegó la acción planteada, manteniendo incólumes las
resoluciones impugnadas, con costas; con los siguientes argumentos: a) De la revisión de los
antecedentes presentados, se tiene que el proceso disciplinario se inició cuando el representado
del accionante aún formaba parte del Ministerio Público, lo que desvirtúa su impugnación en
sentido de que no podía ser procesado en dicha sede, habida cuenta que por mandato del art. 27
del Manual de Régimen Disciplinario y lo previsto por el DS 26237, la renuncia o cesación de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 375
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

funciones de un funcionario público, no le exime de responsabilidad por incurrir en faltas y


contravenciones cometidas en el ejercicio de sus funciones, un razonamiento en contrario,
implicaría dejar en la impunidad por la simple renuncia, actos que merecen ser investigados y
sancionados, se concluye entonces que el proceso disciplinario fue sustanciado con toda
legalidad hasta su conclusión, advirtiéndose además la intervención y participación del
mandante de los accionantes, en todas las etapas del mismo; b) En cuanto a la vulneración del
debido proceso en su vertiente de juez natural, se debe considerar que el amparo constitucional
tutela este derecho, en tanto y en cuanto los hechos denunciados involucren la imparcialidad e
independencia del juzgador, no así cuando de competencia se trata, presupuesto fáctico que debe
ser revisado a través de otro proceso en sede constitucional; c) Las resoluciones emitidas por las
autoridades demandadas, son exhaustivas y están debidamente fundamentadas y motivadas de
tal modo que es fácil apreciar el razonamiento efectuado por los demandados que decantan
luego en la decisión asumida; d) Los incidentes de incompetencia y de extinción de denuncia
por desistimiento, fueron debidamente considerados y resueltos en la audiencia de
enjuiciamiento, existiendo pronunciamiento expreso por el Tribunal Sumariante sobre dichos
aspectos; y e) La sanción impuesta en la Resolución 003/2008, responde a los datos del proceso,
de modo tal que el fallo por sí mismo explica las razones por las que se dictó la sanción de
destitución definitiva del cargo del procesado, máxime si se considera que el art. 109.3 de la
LOMP, no da otras opciones en cuanto a la sanción a imponerse.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones siguientes:

II.1. Por memorial presentado el 16 de julio de 2007, Pablo Alfredo Larrazabal Vallejos,
presentó denuncia contra Edson Almanza Mercado, por presuntamente haber incurrido en las
faltas muy graves y graves previstas y sancionadas por los arts. 107.4, 7 y 11; 108.4, 5, 6,7, 8, 14
y 15 de la LOMP (fs. 1 a 3 y vta.).

II.2 Mediante Resolución 145/2007, de 18 de octubre, el Inspector General del Ministerio


Público, admitió la denuncia formulada contra el representado de los accionantes y dispuso la
apertura de investigación por la presunta comisión de faltas disciplinarias muy graves y graves,
contenidas en los arts. 107.7, 10 y 11; y 108.4 y 5 de la LOMP (fs. 66 a 71).

II.2. El 10 de diciembre de 2007, el Fiscal Investigador de la Inspectoría del Ministerio Público,


emitió Informe Conclusivo, disponiendo la remisión al Fiscal de Distrito de Cochabamba por
estimarse elementos constitutivos de la infracción disciplinaria prevista en los arts. 107.7, 10 y
11; 108.4 y 5 de la LOMP, así como de los delitos de incumplimiento de deberes y uso indebido
de influencias (fs. 5 a 14). En base a ello, por Resolución Conclusiva 005/2008 de 11 de enero,
Gonzalo Flores Céspedes, Inspector General, dispuso el enjuiciamiento del denunciado (fs. 16 a
17).
II.3. En audiencia preliminar de 4 de marzo de 2008, el Fiscal de Distrito de Oruro Rodolfo
Fuentes Borda, señaló audiencia de procesamiento, pronunciándose además respecto al
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 376
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

“abandono de la denuncia” por Pablo Alfredo Larrazabal, rechazando la misma con el


argumento que se trataba de una audiencia preliminar en la que estaba presente el Inspector
General del Ministerio Público, quien era titular en la acusación; respecto a que el denunciado
había dejado de ser funcionario, se rechazó dicho planteamiento invocando lo previsto por los
arts. 30.4 de la LOMP y 27 del Manual de Régimen Disciplinario del Ministerio Público, ante lo
cual la defensa se reservó el derecho de apelación (fs. 24 a 27).

II.4. Por memorial presentado el 18 de marzo de 2008, el mandante de los accionantes planteó
incompetencia y extinción de denuncia (fs. 31 a 32 vta.). En Audiencia de Enjuiciamiento de 15
de mayo de 2008, el procesado solicitó se de por desistida y abandonada la denuncia en su
contra, solicitud que fue resuelta en la misma audiencia, aceptando el desistimiento “simple y
llanamente”, disponiéndose que el proceso continúe a instancias del Inspector General del
Ministerio Público; respecto al planteamiento de incompetencia, y extinción de acción y de
denuncia y actividad procesal defectuosa, el Fiscal de Distrito de Oruro las rechazó (fs. 43 a 49 y
vta.).

II.5. Revisada y analizada la prueba de cargo y de descargo, el Fiscal de Distrito de Oruro,


emitió Resolución condenatoria 003/2008 contra Edson Sydney Almanza Mercado, por haber
cometido y ser autor material de las faltas muy graves previstas por el art. 107.7, 10 y 11 y las
faltas graves establecidas por los numerales 4 y 5 del art. 108, de la LOMP, imponiendo la
sanción de destitución definitiva del cargo y consiguiente retiro de la Carrera Fiscal, con
imposición de costas al procesado (fs. 50 a 52 vta.).

II.6. Por memorial presentado el 12 de junio de 2008, el representado de los accionantes


interpuso recurso de apelación contra la Resolución 003/2008 (fs. 54 a 60 vta.).

II.7. Mediante Resolución de 26 de septiembre de 2008, el Tribunal Nacional de Disciplina del


Ministerio Público, confirmó en todas sus partes la Resolución 003/2008 de 15 de mayo (fs. 62 a
64 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan la vulneración de los derechos de su representado a la “seguridad


jurídica”, al debido proceso, al juez natural, a la defensa y al trabajo, por cuanto las autoridades
demandadas, como parte del Ministerio Público, admitieron la denuncia y apertura de
investigación en base a una denuncia particular, desarrollando todo el proceso disciplinario que
derivó en la sanción de destitución, sin considerar que la demanda fue admitida cuando su
mandante había cesado en sus funciones como Fiscal y se encontraba como alumno regular del
Instituto de Capacitación del Ministerio Público, pese a dicha irregularidad además de otras
suscitadas en el proceso, el mismo continuó, siendo su excepción de incompetencia rechazada
sin argumentos; es decir, que todas las autoridades demandadas siguieron en su contra y fallaron
en un proceso en el que no tenían competencia para actuar porque ya no era funcionario público.

Precisado el problema jurídico planteado, corresponde verificar si existe una causal que impida
ingresar al fondo de la problemática planteada, caso contrario concierne determinar si existió
vulneración de los derechos fundamentales y garantías constitucionales invocadas.

III.1. La acción de amparo constitucional: Naturaleza jurídica y alcance

La acción de amparo constitucional, comprendida en el art. 128 de la CPE, está instituida por
mandato constitucional, como una acción de defensa contra actos u omisiones ilegales o

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 377


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

indebidos de los servidores públicos o de persona individual o colectiva, que restrinjan,


supriman o amenacen restringir o suprimir derechos fundamentales y garantías constitucionales.
Se constituye entonces en una de las acciones de defensa más amplia en cuanto al alcance de su
ámbito de tutela y protección de derechos, rigiendo para su interposición, los principios de
inmediatez y subsidiariedad, conforme lo establece el art. 129 de la Ley Fundamental;
denotándose de la naturaleza de esta acción su objeto de protección y resguardo de derechos en
el marco de los valores y principios ético-morales establecidos en la Constitución Política del
Estado, contribuyendo desde la justicia constitucional a efectivizar y materializar esos valores y
principios para una vida armoniosa, con equidad, igualdad de oportunidades y dignidad, entre
otros valores, en los que se sustenta el Estado Plurinacional y que son parte de la sociedad
plural.

III.2. El juez natural en su elemento competencia y su protección vía amparo


constitucional

Precisada la naturaleza y alcance del amparo constitucional, corresponde referirse al debido


proceso y la garantía de la competencia, a objeto de determinar si la misma corresponde ser
tutelada vía la presente acción de defensa.

En ese sentido, se debe partir por precisar que la competencia implica la capacidad legal de
asumir y ejecutar decisiones generadoras de consecuencias y efectos jurídico-administrativos, lo
que nos deriva al debido proceso y sus distintos elementos que se materializan a través las
actuaciones procesales que se desarrollan en un juicio o en un proceso administrativo. Al
respecto, es pertinente referirse a los razonamientos asumidos en la SC 099/2010-R de 10 de
mayo, que a partir del desarrollo del juez natural en su elemento competencia, establece la
delimitación del ámbito de protección de la acción de amparo constitucional y del recurso
directo de nulidad, señalando:

“El juez natural, constituye una garantía constitucional con incidencia en el campo tanto
jurisdiccional como administrativo, cuyo 'núcleo duro' está compuesto por tres elementos a
saber: la competencia, la imparcialidad y la independencia.

(…) la competencia como medida y continente de la potestad administrativa es indelegable,


inconvalidable y emana solamente de la ley y de la Constitución; entonces, la importancia que
reviste este elemento del juez natural en el Estado Social y Democrático de Derecho, hace que
el ordenamiento jurídico-constitucional boliviano le conceda un resguardo reforzado frente a
actos de quienes usurpen funciones que no les competen o contra los actos de quienes ejerzan
jurisdicción o potestad que no emane de la ley.
(…) el control de constitucionalidad al margen de su rostro preventivo o reparador, tiene tres
brazos operativos de control a saber: el primero referente al control normativo de
constitucionalidad; el segundo vinculado al control reforzado de constitucionalidad, referente a
la vigilancia y resguardo de derechos fundamentales y finalmente, el control competencial de
constitucionalidad, a través del cual se protege la garantía de competencia frente a actos
lesivos que puedan afectarla.

(…)
En mérito a lo señalado, se puede determinar que el antes recurso de amparo constitucional,
ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección eficaz y pertinente para el resguardo
del derecho al debido proceso en todos sus elementos incluido el juez natural, pero, solamente
en sus elementos imparcialidad e independencia, en ese sentido, debe precisarse que la
protección del tercer componente del juez natural; el referente a la competencia en cuanto a los
supuestos de hecho antes descritos; es decir, usurpación de funciones que no estén mencionadas
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 378
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

por ley, ejercicio de potestad administrativa que no emane de la ley, resoluciones judiciales
emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley o pronunciadas por autoridad
jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus funciones o que hubieren cesado en las mismas;
se encuentran resguardados específicamente por el recurso directo de nulidad.”
De los razonamientos doctrinales glosados, se concluye que el ámbito de protección del amparo
constitucional en cuanto al resguardo de derechos emergentes del juez natural, se centra en los
elementos de imparcialidad e independencia, sin que sea posible la valoración y consideración
del elemento competencia, toda vez que el mismo se encuentra en el ámbito de control de
constitucionalidad, que tiene al recurso directo de nulidad como medio de resguardo de la
garantía contenida en el art. 122 de la CPE, referida a que son nulos los actos de las personas
que usurpen funciones que no les competen, así como los actos de las que ejercen jurisdicción o
potestad que no emane de la ley, es decir, que la garantía citada se refiere a la nulidad de todas
las actuaciones realizadas sin competencia.

Dentro de ese marco, es evidente que el amparo constitucional no es la vía idónea para restituir
la garantía prevista en el art. 122 de la CPE, dado que vía control normativo existe un recurso
específico e idóneo para ello, que conforme a su naturaleza y alcance revisa todas las
actuaciones realizadas sin competencia, sin distinción del hecho generador de las mismas. Ello
implica, que no puede desnaturalizarse la actuación del juez natural en su elemento competencia,
interponiendo un amparo constitucional alegando vulneraciones al derecho al juez natural y la
garantía descrita, pues dicha situación hace que la presente acción sea manifiestamente
improcedente, -se reitera- porque no es el medio ni vía idónea para conocer y resolver las
cuestiones planteadas sobre competencia.

La afirmación precedente, se sustenta en el principio de separación de poderes, en virtud del cual


el Órgano Ejecutivo en sus distintos niveles se encuentra investido de potestad administrativa
que deviene de la función administrativa delegada; ahora bien, dado que la garantía de la
competencia comprende tanto al ámbito judicial como al administrativo, es pertinente aclarar
que en la esfera administrativa, existen dos supuestos claros para la protección del juez natural
en su elemento competencia a través del recurso directo de nulidad, que son la usurpación de
funciones que no estén establecidas por ley, y el ejercicio de potestad administrativa, que no
emane de la ley. Entendimiento concordante con el razonamiento desarrollado en la SC
1660/2010-R de 25 de octubre.

III.3. El caso en análisis

Efectuadas las precisiones precedentes, corresponde señalar que en el presente caso, si bien los
accionantes denuncian varias irregularidades en el proceso disciplinario seguido contra su
representado y que derivó en su destitución como Fiscal de Materia; empero, toda la
fundamentación de la demanda radica en que las autoridades demandadas, actuaron sin
competencia en los distintos niveles y funciones ejercidas en el proceso por cuanto -alegan en
forma reiterada los accionantes- se admitió una denuncia, sustanció un proceso y se emitió
resoluciones, sin considerar que su representado había cesado en sus funciones y ya no era parte
del Ministerio Público, por ende, sostienen que todas las autoridades demandadas sustanciaron y
fallaron en un proceso en el que no tenían competencia para actuar, porque su mandante ya no
era funcionario público.

Del planteamiento de la problemática, se evidencia que los accionantes impugnan y pretenden


que mediante esta acción tutelar de defensa, se revise y determine la competencia de las
autoridades demandadas para iniciar y sustanciar proceso disciplinario en su contra,
confirmándose esa pretensión con el petitorio contenido en la demanda, en el que se solicita la
nulidad de todas las resoluciones asumidas por los demandados, invocando para ello, entre otros
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 379
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

derechos, el debido proceso y el juez natural, recalcando siempre en el contenido de su demanda


que los demandados actuaron sin competencia.
Al respecto, conforme se ha establecido en el Fundamento Jurídico III.2 del presente fallo, el
ámbito de protección del debido proceso en su componente juez natural vía amparo
constitucional, por su naturaleza misma alcanza únicamente a los elementos imparcialidad e
independencia, y no así a la competencia que corresponde a otro recurso constitucional, como lo
es el recurso directo de nulidad que tiene por objeto resguardar la garantía de la competencia en
cuanto a situaciones de usurpación de funciones, ejercicio de potestad administrativa y
resoluciones emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley, entre otras.

En aplicación de los razonamientos precedentes, la presente acción de amparo constitucional


debe ser denegada, por cuanto el principal argumento alegado por los accionantes, radica en una
presunta actuación sin competencia de las autoridades demandadas, dado que al no ser
funcionario público, ni tampoco parte del Ministerio Público por haber cesado en sus funciones,
los demandados no podían haber seguido proceso disciplinario en su contra, demanda que no
puede ser conocida y menos resuelta a través del amparo constitucional al no ser el medio
idóneo para dilucidar esa situación, pues conforme se ha expresado ampliamente el recurso
directo de nulidad se constituye en el medio no sólo idóneo, sino también eficaz para el
resguardo de la competencia como garantía prevista por la Ley Fundamental.

En ese orden, un entendimiento contrario al señalado, implicaría desconocer la verdadera


naturaleza jurídica, alcance y objeto del recurso directo de nulidad, creando una disfunción
procesal al utilizar alternativamente acciones y recursos constitucionales, sin considerar la
pertinencia de los mismos. Por los razonamientos y fundamentos expuestos, corresponde
denegar la tutela solicitada.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al denegar la acción tutelar, ha actuado


correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución SCII-213/2011 de 11 de junio, cursante de fs. 514 a 521, dictada por
la Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Chuquisaca y en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración
de que no se ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MARZO 380


ABRIL

381
382
383
384
RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS
POR LAS SALAS: PRIMERA ESPECIALIZADA,
SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

385
386
CONTROL DE
CONSTITUCIONALIDAD
TUTELAR

387
388
Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de
Acciones de Defensa

389
390
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0050/2012


Sucre, 3 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00058-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 01/2012 de 30 de enero, cursante de fs. 119 a 125 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Edwin Herrera Gonzales y
Mónica Aramayo Balderas contra Gustavo Ricardo Zárate López, Alcalde Municipal;
Carlos Guido Vallejos Villalba, Ivert Vallejos Delgado, Margoth Echalar Zurita, Justo
Arancibia Maldonado, Limberth Peñaranda Quispe, Juan Irala Ruíz, Raquel Velásquez
Cuéllar, Concejales Municipales; Enrique Montaño Boero, Asesor Legal; y, Carlos
Marcelo Palacios Flores, Responsable de Catastro Urbano, todos del Gobierno Municipal
de Monteagudo.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURIDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por memorial presentado el 20 de enero de 2012, cursante de fs. 26 a 29 vta. y complementario


de 25 del mismo mes y año, cursante a fs. 39 y vta., los accionantes refieren que las autoridades
demandadas vulneraron el derecho propietario que tienen sobre el inmueble urbano situado en la
calle Sucre esquina Padilla de la ciudad de Monteagudo, toda vez que cuando se encontraban
construyendo las dos primeras habitaciones de su vivienda, el 13 de enero del año en curso, el
encargado de Catastro Urbano paralizó la obra, manifestando que la Alcaldía Municipal de esa
localidad, había previsto ensanchar la calle y aunque nunca fueron notificados con una orden
expresa, fue desconocido el correspondiente plano de línea y nivel del inmueble debidamente
aprobado. Ante esa situación, con el objeto de presentar una queja ante el Alcalde Municipal, se
apersonaron a las oficinas de la Alcaldía el 16 de enero del presente año, donde el nombrado
funcionario les hizo entrega del oficio 02/2012 anunciándoles que su terreno sería expropiado,
expresándoles que la Alcaldía cuenta con el monto de Bs80 000.- (ochenta mil 00/100
bolivianos); monto que ni siquiera cubre la mitad del costo real de su predio.

Agregan que la Alcaldía Municipal de Monteagudo, reconoció su derecho propietario con la


debida aprobación de planos de línea y nivel, así como con el correspondiente cobro del
impuesto municipal de la gestión 2010; sin embargo, el referido funcionario continúa haciendo
caso omiso de las normas sustantivas que precautelan sus derechos de propiedad, así como de
las normas procesales que garantizan su acceso a una tutela judicial eficaz y en el colmo de la
prepotencia y abuso, en representación de la Alcaldía quiere desconocer su derecho propietario,
cuya actitud justifica la interposición de este recurso, al encontrarse amenazados con esos actos
antijurídicos.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 391
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Considera lesionados los derechos a la propiedad privada y a la “seguridad jurídica”, citando el


art. 56 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se declare “procedente el presente recurso” (sic) y se ordene a las autoridades


demandadas se abstengan de restringir y amenazar el libre ejercicio de su derecho propietario.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

En la audiencia pública de amparo efectuada el 30 de enero de 2012, según consta en el acta


cursante de fs. 114 a 118 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Los accionantes a través de su abogado ratificaron en su integridad el memorial de la acción.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Las autoridades municipales demandadas, a través de sus abogados señalaron que: a) No se


asumió ninguna medida de hecho contra los accionantes, puesto que sólo se está velando por
poner en orden la planificación del municipio de Monteagudo, conforme es obligación de las
autoridades municipales; b) En la presente acción, no existe relación de causalidad entre el
hecho denunciado y la “causa de pedir”, tampoco se cumplió con el principio de subsidiariedad
y no es evidente que se hubiesen adoptado medidas de hecho que den lugar a la excepción del
referido principio; c) El derecho de propiedad no es ilimitado ni es irrestricto, puesto que
prevalece el interés general respecto al privado y de acuerdo a las competencias que tiene el
Gobierno Municipal, puede ejercer la expropiación además del control urbanístico del
municipio, y como de acuerdo al art. 3 de la Ordenanza Municipal (OM) 29/07, está prohibido
demoler o construir sin la autorización de Catastro y si bien los accionantes tienen plano de línea
y nivel, no cuentan con plano de construcción; y, d) Los Concejales demandados carecen de
legitimación porque no cometieron el acto denunciado y solo cumplieron sus atribuciones al
emitir la OM 07/2012, disponiendo el ensanchamiento de la calle Sucre esquina Padilla, que no
fue objeto de ninguno de los recursos administrativos previstos por el art. 140 de la Ley de
Municipalidades (LM).

I.2.3. Resolución

A través de la Resolución 01/2012, cursante de fs. 119 a 125 vta., el Juez Segundo de Partido
Mixto, del Trabajo y de Seguridad Social de Monteagudo, provincia Hernando Siles del
Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituido en Juez de garantías, declaró
“improcedente” la acción de amparo constitucional, con costas, sin responsabilidad civil ni
penal, con los siguientes fundamentos: 1) Los accionantes iniciaron y continúan realizando obras
de construcción en el inmueble de su propiedad a pesar de las observaciones y prohibiciones
hechas por el ente municipal, por lo que no acreditaron los supuestos de la excepción del
principio de subsidiariedad; y, 2) No agotaron la vía administrativa para hacer valer sus derechos
que creen vulnerados, pues debieron utilizar y agotar todos los recursos que la Ley de
Municipalidades prevé.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 392
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.1. Los accionantes, por escritura pública suscrita el 4 de agosto de 2011, adquirieron el
inmueble ubicado en calle Sucre esquina Padilla de la ciudad de Monteagudo, registrando su
derecho propietario en Derechos Reales del Departamento de Chuquisaca el 8 de agosto del
indicado año (fs. 5 a 8).

II.2. El 28 de septiembre de 2011, los accionantes obtuvieron la aprobación del Gobierno


Municipal de Monteagudo, del plano de línea municipal y otorgación de normas del lote de
terreno de su propiedad, de 178.90 m2 de superficie útil, ubicado en calle Padilla esquina Sucre
de esa ciudad (fs. 10 y 11).

II.3. A través de la nota 013 de 12 de enero de 2012, el Jefe de la Unidad de Catastro, hizo
conocer a los accionantes que su predio ubicado en calle Padilla esquina Sucre de la ciudad de
Monteagudo, será objeto de afectación con destino al proyecto de ensanchamiento de la vía para
mejoramiento de la estructura vial, por lo que solicitó suspender todo intento de construcción,
remodelación u otro trabajo (fs. 12).

II.4. Por autorización de 16 de enero de 2012, el Jefe de Catastro Urbano permitió a los
accionantes el retiro de escombros del inmueble de su propiedad (fs. 19).

II.5. Por nota 02/2012 de 13 de enero, el Asesor Legal de la Alcaldía Municipal de Monteagudo,
comunicó a los accionantes sobre la paralización oficial de trabajos de construcción en su
inmueble de calle Sucre esquina Padilla, mientras no presenten el plano de construcción
debidamente aprobado, con la advertencia de proceder a su demolición en caso de
incumplimiento. Asimismo, les hizo conocer sobre la afectación de su inmueble para el
ensanchamiento de vía (fs. 13).

II.6. El 16 de enero de 2012, el accionante Edwin Herrera Gonzales, presentó memorial ante el
Oficial Mayor Técnico de la Alcaldía Municipal de Monteagudo, solicitando la aprobación de
los planos de construcción de su inmueble, ubicado en calle Padilla esquina Sucre (fs. 22 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan la vulneración de los derechos a la propiedad privada y a la “seguridad


jurídica”, porque el encargado de Catastro Urbano de la Alcaldía Municipal de Monteagudo, con
el argumento de estar previsto el ensanchamiento de la calle, el 13 de enero del año en curso,
paralizó la obra que estaban ejecutando en su terreno, aunque nunca fueron notificados con una
orden expresa y a pesar de contar con el plano de línea y nivel aprobado, el referido funcionario
continúa haciendo caso omiso de las normas sustantivas que precautelan sus derechos de
propiedad, así como de las normas procesales que garantizan su acceso a una tutela judicial
eficaz y en el colmo de la prepotencia y abuso, en representación de la Alcaldía quiere
desconocer su derecho propietario, cuya actitud justifica la interposición de esta acción, al
encontrarse amenazados con esos actos antijurídicos, por lo que solicita que se disponga “que
los demandados se abstengan de restringir y amenazar el libre ejercicio de su derecho
propietario” (sic). En revisión, corresponde analizar si la acción de amparo constitucional que se
revisa, cumple con los requisitos para ingresar al análisis de la problemática planteada y en su
caso, si los actos denunciados ameritan conceder la tutela solicitada.

III.1. Requisitos de admisión de la acción de amparo constitucional

Con carácter previo al análisis de la problemática planteada, resulta necesario establecer si los
accionantes observaron los requisitos de forma y contenido de la acción de amparo
constitucional que exige el art. 77 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP)
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 393
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

para su admisión. Al efecto, cabe señalar que la citada norma legal establece los siguientes
requisitos y condiciones de admisión: “1. Acreditar la personería del accionante; 2. Indicar el
nombre y domicilio de la parte demandada, o de su representante legal y el de los terceros
interesados; 3. Exponer con claridad los hechos; 4. Identificar los derechos o garantías que se
consideren vulnerados; 5. Acompañar la prueba en que funda su acción o señalar el lugar en que
se encuentra; en este último caso la jueza, juez o tribunal, al momento de disponer la citación de
la persona o autoridad accionada, ordenará a quien corresponda presentar la prueba señalada,
bajo responsabilidad; y, 6. Fijar con precisión la tutela que se solicita para restablecer los
derechos o garantías restringidos, suprimidos, amenazados o vulnerados”.

De los requisitos enumerados se tienen los de forma y los de contenido, los cuales fueron objeto
de diferenciación por el Tribunal Constitucional cuando le correspondió analizar la derogada
Ley 1836. Siguiendo esa corriente, podemos señalar que los requisitos de forma están referidos a
la acreditación de la personería del accionante, nombre y domicilio de la parte demandada o de
su representante legal, así como de los terceros interesados, además de la exigencia de adjuntar
la prueba pertinente; condiciones o requisitos de admisibilidad que de ser inobservados, pueden
ser subsanados por el accionante, es decir que el tribunal o juez de garantías que extrañe el
cumplimiento de dichos requisitos, dispondrá su subsanación dentro de un plazo prudencial, que
para el caso, se establece cuarenta y ocho horas, pero en caso de no ser subsanados dará lugar al
rechazo in límine de la acción.

En cambio, la inobservancia de los requisitos de contenido, referidos a la claridad y precisión en


la exposición de los hechos que motivan la acción, identificar los derechos o garantías
considerados vulnerados y fijar con precisión la tutela que se solicita para el restablecimiento de
los derechos o garantías restringidos, suprimidos, amenazados o vulnerados, dará lugar al
rechazo in límine de la acción de amparo constitucional planteada, dando lugar a que el
accionante vuelva a intentar la acción subsanando los defectos observados.

Recogiendo los entendimientos jurisprudenciales del Tribunal Constitucional, con relación al


tema, tenemos que la SC 0365/2005-R de 13 de abril, citada de forma reiterada en la
jurisprudencia del mismo Tribunal (Autos Constitucionales 0019/2010-RCA; 0021/2010-RCA y
0042/2010-RCA) respecto a los requisitos de forma y contenido que deben observarse, precisó
que: “…depende que tanto el Juez o Tribunal de amparo así como el Tribunal Constitucional,
puedan compulsar sobre la base de criterios objetivos, la legitimación de las partes, así como la
veracidad de los hechos reclamados y los derechos lesionados, para en definitiva otorgar o
negar el amparo expresamente solicitado; a su vez tiende a garantizar también que con tales
precisiones puedan estar a derecho para asumir defensa en debida forma.

(…)

A esta altura del análisis, corresponde precisar, que los requisitos exigidos por la Ley del
Tribunal Constitucional en el precepto aludido (art. 97 de la LTC) están destinados a evitar el
inicio de un procedimiento que carezca de los elementos básicos necesarios para decidir sobre
la pretensión jurídica deducida; sea para estimarla o desestimarla. De ahí que resulta
conveniente puntualizar la relevancia procesal que tienen los tres requisitos de contenido, a que
se refiere el art. 97 de Ley del Tribunal Constitucional:

III.1.1. Exponer con precisión y claridad los hechos que le sirvan de


fundamento (art. 97.III de la LTC)

Se trata de una relación fáctica que debe hacer el recurrente; pues está referida a los hechos
que sirven de fundamento del recurso o de la razón o razones en la que el recurrente apoya la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 394
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

protección que solicita, que no siempre está referido a un solo hecho sino a varios hechos, que
de manera congruente se reconducen y sirven de fundamento del petitorio. Expuestos los
hechos, en el marco señalado, impide que la acción o el contenido del recurso pueda ser
variado o cambiado a lo largo del proceso del amparo; de lo contrario, se estaría frente a un
nuevo recurso.

(…)

En síntesis, el elemento fáctico aludido (conjunto de hechos) y su calificación jurídica (derechos


o garantías supuestamente violados) constituyen lo que la doctrina denomina genéricamente 'la
causa de pedir'; causa de pedir que debe ser claramente precisada y delimitada por el
recurrente.

Conforme a lo señalado, los hechos jurídicamente relevantes que sirven de fundamento fáctico
del recurso deben ser, como lo expresa la ley, expuestos con precisión y claridad, dado que los
mismos delimitan la causa de pedir y vinculan al Tribunal de amparo, es decir que éste, deberá
resolver la problemática planteada conforme en esa descripción de los hechos y su calificación
jurídica (derechos lesionados) y no otra.

III.1.2. Precisar los derechos o garantías que consideren suprimidos o


amenazados (art. 97.IV de la LTC).

Como quedó precisado en el punto anterior, la causa de pedir contiene dos elementos: 1) el
elemento fáctico que está referido a los hechos que sirven de fundamento al recurso; 2) el
elemento normativo, es decir, los derechos o garantías invocados como lesionados por esos
hechos, que deben ser precisados por el recurrente; sin embargo, como en los hechos debe
acreditarse el derecho vulnerado, es preciso que exista una relación de causalidad entre el
hecho que sirve de fundamento y la lesión causada al derecho o garantía. De ahí que el
cumplimiento de esta exigencia no se reduce a enumerar artículos, sino a explicar desde el
punto de vista causal, cómo esos hechos han lesionado el derecho en cuestión.

III.1.3. Fijar con precisión el amparo que se solicita para preservar o


restablecer el derecho o la garantía vulnerados o amenazados (art. 97.VI de la LTC).

Por principio general, el Juez de tutela está obligado a conferir solamente lo que se le ha
pedido; esto muestra la enorme importancia que tiene el petitium de la causa, pues, el Juez está
vinculado a la misma; esto es, deberá conceder o negar el petitorio formulado; sólo
excepcionalmente, dada la naturaleza de los derechos protegidos es posible que el Juez
constitucional pueda conceder una tutela ultra petita, de cara a dar efectividad e inmediatez a
la protección del derecho o la garantía vulnerada, cuando advierta que existió error a tiempo
de formular el petitorio. Extremo que deberá ser ponderado en cada caso concreto, al tratarse
de una excepción”.

III.2. Análisis del caso concreto

En el caso analizado, los accionantes no cumplieron con todos los requisitos previstos en el art.
77 de la LTCP, puesto que omitieron fijar con precisión la tutela que solicitan para restablecer
los derechos alegados como vulnerados, además de no existir la relación de causalidad que
necesariamente debe darse entre los hechos, el derecho vulnerado y la petición, pues en la acción
presentada, los accionantes refieren que el encargado de Catastro Urbano de la Alcaldía
Municipal, paralizó su obra y cuando se apersonaron a reclamar, les entregaron una nota
comunicándoles que su predio sería expropiado para el ensanchamiento de la calle; sin embargo,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 395
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del texto del memorial de demanda no se advierte cuál fue la actuación de las autoridades
municipales (Alcalde y Concejales) que vulneró el derecho propietario de los accionantes o su
derecho “a la seguridad jurídica”, concluyendo con una confusa petición en sentido de que se
declare “procedente el presente recurso” (sic) y se ordene a las autoridades edilicias “se
abstengan de restringir y amenazar el libre ejercicio” (sic) de su derecho propietario;
consiguientemente no establecen el nexo de causalidad entre los hechos descritos y los derechos
denunciados como vulnerados, con la petición realizada, lo que impide a este Tribunal, ingresar
al análisis de fondo de la problemática planteada por lo que corresponde denegar la tutela
solicitada.

En consecuencia, el Juez de garantías, al declarar “improcedente” la presente acción de amparo


constitucional, aunque con otros fundamentos y utilizando una terminología incorrecta, ha
evaluado en forma adecuada los datos del proceso y las normas aplicables al presente caso.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: DENEGAR la
tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0051/2012


Sucre, 5 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00050-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 028/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 158 a 161 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Pablo Hernando Ruiz Durán en
representación legal de Justo Javier Villavicencio Calderón contra Jorge Isaac von Borries
Méndez, (actual Magistrado), José Luis Baptista Morales, Hugo Suarez Calbimonte,
Teófilo Tarquino Mújica, Esteban Miranda Terán, Jorge Monasterio Franco, Ana María
Forest Cors y Ramiro José Guerrero Peñaranda; todos ellos ex Ministros que
conformaban Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia; Gonzalo Miguel Hurtado
Zamorano, Fidel Marcos Tordoya Rivas, Maritza Suntura Juaniquina, Pastor Segundo
Mamani Villca, Rómulo Calle Mamani, Rita Susana Nava Durán, Antonio Guido
Campero Segovia y Norka Natalia Mercado Guzmán; Magistrados del Tribunal Supremo
de Justicia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 396


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 9 de enero de 2012, cursante de fs. 27 a 32, el representante del
accionante manifiesta que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La Sala Plena de la entonces Corte Suprema de Justicia, dentro del proceso penal por caso de
corte seguido a instancia del Ministerio Público y la Alcaldía Municipal de Potosí contra su
representado y otros, se emitió el Auto Supremo 103/2011 de 7 de abril, en el que se resolvieron
los recursos de casación planteados contra la Sentencia de primera instancia.

Agrega que, el 23 de enero de 2007, la antes mencionada Sala Plena, emitió un primer fallo: el
Auto Supremo 027/2007 de la misma fecha, en el que constaba la intervención de un segundo y
hasta de un tercer Relator, empero sin la existencia de un sorteo previo. En estas circunstancias
el coprocesado Juvenal “Pilipps” Bernal, promovió un recurso de amparo constitucional
solicitando se deje sin efecto el referido Auto Supremo, denunciando lesión a la garantía al juez
natural y el debido proceso, por cuanto la causa no fue debidamente sorteada emitiendo el
Tribunal Constitucional al respecto la SC 0862/2010-R de 10 de agosto, concediendo la tutela
solicitada y consiguientemente la nulidad del Auto Supremo 027/2007 y su Complementario
053/2007 de 13 de marzo.

Finalmente señala que, en cumplimiento de la Sentencia Constitucional antes mencionada, la


Sala Plena de la entonces Corte Suprema de Justicia, sorteó nuevamente el proceso,
constituyéndose en relator el Ministro Teófilo Tarquino Mújica, quien presentó proyecto ante la
Sala Plena el 10 de septiembre de 2010. Sin embargo, una vez que se emitió el Auto Supremo
103/2011 de 7 de abril, aparece como segundo Ministro Relator, José Luís Baptista Morales; sin
que exista justificativo alguno sobre su participación, menos constancia de que se haya
procedido a un segundo sorteo para que a través de éste, se constituya como segundo Ministro
Relator; lo que implica que incurrieron en el mismo error, motivo de la nulidad del primer Auto
Supremo mediante la referida SC 0862/2010-R.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerado sus derechos y garantías al debido proceso, a la defensa, y a la


seguridad jurídica, citando al efecto los arts. 23. III, 26, 115.I y II, 117.I y 120.I de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con dichos antecedentes, el acciónate solicita se conceda la tutela a su representado y se deje sin
efecto el Auto Supremo 103/2011.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 1 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante de


fs. 152 a 157 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante por intermedio de su abogado ratificó los términos de la demanda.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 397


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

De la revisión de obrados, se constatan los siguientes informes: a) José Luis Baptista Morales,
ex Ministro de la Corte Suprema de Justicia, señaló que no presentó objeción alguna acerca de
los fundamentos, ni sobre las sanciones a cada uno de los procesados respecto del proyecto de
resolución elaborado por el Ministro Relator; emitiendo criterio, únicamente en torno a la
estructura formal de dicho proyecto, como consta en acta, no habiendo por consiguiente la
necesidad de otro sorteo, encomendándosele a éste que presente el mismo proyecto con otra
redacción; por lo informado pide se deniegue la tutela (fs. 70 y vta.); b) Jorge Isaac von Borries
Méndez, ex Ministro de la mencionada Corte y actual Magistrado del Tribunal Supremo de
Justicia, indicó que, la jurisprudencia invocada en el presente caso, no es vinculante por no
existir analogía respecto del presente caso con los invocados, toda vez que, ha sido de total
conocimiento la conformación del Tribunal que emitió el fallo, no habiéndose producido
cambios o sustitución de sus integrantes; Respecto al juez natural y a la imparcialidad señala que
éstos no se vulneraron, habiendo tenido el accionante conocimiento de la conformación de todos
los miembros del Tribunal colegiado, es decir de la Sala Plena, y no realizó ninguna acción al
respecto en su momento dentro el proceso ordinario, por consiguiente, ha precluido dicho
derecho, no pudiendo revisar la jurisdicción constitucional aspectos concernientes únicamente a
la jurisdicción ordinaria, toda vez que, la asignación de un magistrado relator por sorteo es un
aspecto interno que corresponde a un tribunal, del cual ya se conocían a sus integrantes, y que, el
accionante no objetó; por lo que solicita se deniegue la tutela solicitada (fs. 134 a 138); y, c)
Teófilo Tarquino Mújica, ex Ministro de la mencionada Corte, apersonándose ante el Tribunal
de garantías constitucionales, hace conocer que a la fecha, cesó en su cargo (fs. 151).

Por otra parte, se evidencia el apersonamiento de Rita Susana Nava Durán, Magistrada del
Tribunal Supremo de Justicia, quien ante el Tribunal de garantías expresa que dará
cumplimiento a la Resolución que asuma dicho Tribunal (fs. 56 y vta.).

Por memorial cursante de fs. 57 a 58, Gonzalo Miguel Hurtado Zamorano, Fidel Marcos
Tordoya Rivas, Maritza Suntura Juaniquina, Pastor Segundo Mamani Villca, Rómulo Calle
Mamani, Antonio Guido Campero Segoviay y, Norka Natalia Mercado Guzmán, miembros del
Tribunal Supremo de Justicia, devuelven cédulas arguyendo que el Auto Supremo 103/2011,
pronunciada por la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia, la misma que funcionó hasta el
31 de diciembre de 2011; en consecuencia, los actuales Magistrados del Tribunal Supremo de
Justicia no pronunciaron la Resolución objeto de la acción; por consiguiente, carecen de
legitimación pasiva para ser accionados, porque no les corresponde informar sobre dicho asunto.

I.2.3. Informe de tercero interesado

El Fiscal General del Estado, mediante sus apoderados, presentó informe cursante de fs. 145 a
150, arguyendo: 1) La protección a la seguridad jurídica que invoca el accionante no puede ser
atendida en virtud que la misma es un principio y ya no un derecho como se consagraba en la
anterior Constitución Política del Estado (CPE), existiendo amplia jurisprudencia al respecto; 2)
Señala que la carga argumentativa reside en el accionante, no pudiendo exponer una
fundamentación lógica respecto a la alegación de los derechos a la defensa y al debido proceso
invocados en la presente causa, pues no da razón ni explica cómo le afectó la no realización de
un segundo sorteo del cual no tuvo conocimiento y la designación de un segundo Relator en la
Resolución del caso concreto; y 3) El accionante debió haber planteado un recurso de nulidad de
conformidad con el art. 122 de la CPE y no así la presente acción, toda vez que ante la falta de
sorteo para un segundo Relator, existe una usurpación de funciones, solicitando se deniegue la
tutela.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 398


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.4. Resolución

La Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca,


constituida en Tribunal de garantías, por Resolución 028/2012 de 2 de febrero, cursante de fs.
158 a 161 vta., denegó la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: i) El proceso penal
instaurado contra el ahora representado del accionante se realizó bajo el Código de
Procedimiento Penal de 1972, casos de corte y de conformidad con el art. 270 de este compilado
legal, la Sentencia emitida puede ser recurrida de nulidad o casación ante la Corte Suprema de
Justicia; constituyéndose así como Juez Natural el Pleno de la mencionada Corte, no así el
ministro que eventualmente se constituirá en relator, ni tampoco los disidentes, sino la Sala
Plena; ii) No puede aducir el accionante, que se le limitó la posibilidad de impugnar la
designación de un segundo relator de la causa, pues a partir de la emisión de “Autos”, éste ya
sabía como estaba conformado el Tribunal que resolvería el recurso de casación, figurando entre
ellos el que fuera posteriormente el segundo relator, por lo que si pretendía apartarlo de la causa,
el momento para realizarlo había precluido; iii) Se evidencia que el fondo del primer Ministro
Relator, así como del segundo tenía un contenido similar, variando la estructura del proyecto,
por lo que no existiría controversia sobre los supuestos derechos alegados; y iv) Respecto a la
SC 0862/2010-R de 10 de agosto, que fue invocada como precedente, se debe aclarar que existió
disconformidad entre los Ministros de la Corte Suprema de Justicia con el proyecto de
resolución, renunciando posteriormente a su cargo el primer Relator, siendo nombrados otros
Ministros, de modo tal que, el primer Tribunal conformado para la resolución de la causa cesó,
conformándose uno nuevo con diferentes autoridades, caso en el que sí correspondía realizar un
nuevo sorteo, máxime si no hubo consenso sobre el proyecto de resolución del recurso de
casación planteado, siendo por consiguiente los presupuestos fácticos expuestos distintos.

II. CONCLUSIONES

Del análisis del expediente y de la prueba aportada se concluye lo siguiente:

II.1. Por Auto Supremo 103/2011 de 7 de abril (fs. 14 a 24 vta.), se declara improcedentes los
recursos de casación interpuestos por el ahora representado del accionante Justo Javier
Villavicencio Calderón y otros dentro de proceso penal seguido en su contra por los delitos
contra la función pública, la economía nacional, la seguridad común y la propiedad, declarando
al accionante y otro imputado, como autores de los delitos de malversación, resoluciones
contrarias a la Constitución y las leyes, nombramientos ilegales, suscripción de contratos lesivos
al Estado y conducta antieconómica, imponiéndoseles la pena de seis años de reclusión en cárcel
pública de Cantumarca de la ciudad de Potosí, entre otros.

II.2. Cursa en obrados, la SC 0862/2010-R de 10 de agosto, que concede la tutela constitucional


interpuesta por Juvenal Filipps Bernal contra los miembros de la Sala Plena de la Corte Suprema
de Justicia, con el argumento de que al existir varias disidencias, sin existir consenso en la
votación del primer Relator, como de la segunda Relatora, debió procederse a un nuevo sorteo
para un tercer proyecto, y de esa forma garantizar efectivamente la imparcialidad de la autoridad
judicial que definiría la situación jurídica del procesado, más aún porque fueron nombrados
nuevos Ministros de la mencionada Corte (fs. 2 a 12).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración de sus derechos y garantías constitucionales, toda vez que
la Sala Plena de la entonces Corte Suprema de Justicia, emitió el Auto Supremo 103/2011,
mismo que fue elaborado por un segundo Ministro Relator sin que se realizara el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 399


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

correspondiente sorteo, por cuanto no tuvo la oportunidad de observar e impugnar al segundo


Relator.

En consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de


conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. De la naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, ha sido instituida por la Constitución Política del Estado en
sus arts. 128 y ss., como una medida de defensa de los actos u omisiones ilegales o indebidos de
los servidores públicos, derechos que son reconocidos por la misma Norma Fundamental y que
son inherentes a todos los habitantes del Estado Plurinacional de Bolivia.

Cabe señalar que la Constitución Política del Estado en su capítulo segundo acciones de defensa
contemplada la acción de amparo constitucional indicando en su art. 128: “La Acción de
Amparo Constitucional tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los
servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen
restringir o suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley”, por su parte, el art.
129 señala “La acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea
afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de
acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados”.

III.2. Del derecho al debido proceso y el derecho a la defensa

Respecto al debido proceso y sus alcances, se entiende como el derecho de toda persona a un
proceso justo y equitativo, en el que sus derechos se acomoden a lo establecido por
disposiciones jurídicas generales aplicables a todos aquellos que se hallen en una situación
similar; es decir, comprende el conjunto de requisitos que deben observarse en las instancias
procesales, a fin de que las personas puedan defenderse adecuadamente ante cualquier tipo de
acto emanado del Estado que pueda afectar esos derechos reconocidos por la Constitución
Política del Estado así como los Convenios y Tratados Internacionales. En cuanto a la
obligatoriedad de su respeto, la SC 0119/2003-R de 28 de enero, sostuvo que: "…el derecho al
debido proceso es de aplicación inmediata, vincula a todas las autoridades judiciales o
administrativas y constituye una garantía de legalidad procesal que ha previsto el Constituyente
para proteger la libertad, la seguridad jurídica y la fundamentación o motivación de las
resoluciones judiciales…".

Por otra parte, cabe resaltar que, el debido proceso, como instrumento jurídico destinado a
materializar los valores jurídicos de la justicia e igualdad, está compuesto por elementos como el
derecho al juez natural, derecho a la igualdad procesal de las partes, derecho a no declarar contra
sí mismo, garantía de presunción de inocencia, derecho a la defensa material y técnica, derecho
a no ser juzgado sin dilaciones indebidas, etc.; la Norma Fundamental lo concibe en una triple
dimensión, como un principio, garantía y derecho fundamental a ser observado por los órganos
jurisdiccionales y administrativos a efecto de garantizar el respeto de los derechos
fundamentales y garantías constitucionales a las partes del proceso o de los administrados. Lo
que significa que sólo a través del debido proceso los referidos valores jurídicos se materializan
en su verdadera dimensión, que la sentencia o resolución, sea el resultado de la correcta
aplicación del ordenamiento jurídico y la participación activa de las partes en el ejercicio de sus
derechos en condiciones de igualdad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 400


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La jurisprudencia constitucional, precisó en la SC 2801/2010-R de 28 de diciembre: “Conforme


prevé el art. 115.II de la CPE, el Estado garantiza el derecho al debido proceso y a la defensa;
respecto al debido proceso, la amplia jurisprudencia constitucional desarrollada, indica que es
de aplicación inmediata, vinculante a todas las autoridades judiciales o administrativas y
constituye una garantía de legalidad procesal, prevista por el Constituyente para proteger la
libertad, la seguridad jurídica y la fundamentación o motivación de las resoluciones judiciales.
Además, este derecho tiene dos connotaciones: la defensa de la que gozan las personas
sometidas a un proceso con formalidades específicas, a través de una persona idónea que pueda
patrocinarles y defenderles oportunamente y del mismo modo, respecto a quienes se les inicia
un proceso en contra, permitiendo que tengan conocimiento y acceso a los actuados e impugnen
los mismos en igualdad de condiciones, conforme al procedimiento preestablecido; por ello, el
derecho a la defensa es inviolable por los particulares o autoridades que impidan o restrinjan
su ejercicio. Al respecto la SC 0121/2010-R de 10 de mayo, indicó que: '…el debido proceso,
entendido como el derecho de toda persona a un proceso justo y equitativo en el que sus
derechos se acomoden a lo establecido por disposiciones jurídicas generales aplicables a todos
aquellos que se hallen en una situación similar, consagrado en nuestro texto constitucional en
una triple dimensión, en los arts. art. 115.II y 117.I como garantía, en el art. 137 como derecho
fundamental y en el art. 180 como principio procesal; y en los arts. 8 del Pacto de San José de
Costa Rica y 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, como derecho
humano…".

Respecto al caso analizado, se debe confrontar si dentro de los hechos denunciados,


evidentemente se vulneró el derecho al debido proceso y la defensa.
III.3. Análisis del caso concreto

En el caso expuesto, se denuncia sobre supuestos errores procedimentales que podrían haber
cambiado el resultado final del fallo hoy cuestionado, es decir, del Auto Supremo 103/2011.

En el caso concreto, el accionante aduce que al no hacerle conocer la designación de un segundo


relator, se le limitó la posibilidad de que éste impugnara su designación, no explicando ni
argumentando si efectivamente el accionante tenía algún motivo para hacerlo, ni como dicha
designación, pudo haber cambiado el fondo del fallo hoy cuestionado, es decir, se limita a
invocar un supuesto, sin dar los fundamentos necesarios para que se determine si efectivamente
ello, habría arrojado otro resultado del ahora cuestionado.

Por otro lado, se establece que el accionante, tuvo pleno conocimiento de los miembros que
conformaban la Sala Plena de la entonces Corte Suprema de Justicia, de entre los cuales,
emergería el Relator o proyectista del caso; sin embargo, en su momento no cuestionó a ninguno
de éstos pidiendo su respectiva excusa, no pudiendo pretender a través de la presente acción de
amparo constitucional, la nulidad de un Auto Supremo limitándose a invocar la “posibilidad de
impugnar” al segundo Relator, pues con esa “posibilidad” no demuestra de que manera podría
haber influido en el fallo final y su resultado; por otro lado, la SC 0862/2010-R, que invoca el
accionante como precedente constitucional, al indicar que existen hechos facticos similares con
la presente causa y en la cual concedieron la tutela; se debe precisar que dicha afirmación no es
correcta, toda vez que en el precedente expuesto, los Ministros que conocieron la causa, se
encontraban disconformes encontrándose posturas diferentes entre los proyectos, además de
ello, se cambiaron a las autoridades que conformaban dicha Sala Plena, conformándose una
nueva, motivo por el cual, necesariamente debió haberse realizado un nuevo sorteo, siendo estos
hechos fácticos, completamente distintos a los ocurridos en el precedente invocado.

Por lo anteriormente expresado, el Tribunal de garantías, al haber denegado la tutela solicitada,


ha actuado correctamente.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 401
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: DENEGAR
la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0052/2012


Sucre, 5 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00022-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 18 de enero de 2012, cursante de fs. 25 a 27 vta., pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Elsa Jimenez de Herbas contra
Florentino Veizaga Hidalgo, dirigente de la comunidad de Pampa Mamata, Tito Ferrufino
Guillén, Presidente y Gerardo Hinojosa Ayala, Cajero, ambos del Sistema del Servicio de
Agua Potable de Pampa Mamata.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por memorial presentado el 12 de enero de 2012, cursante de fs. 12 a 17, la accionante manifestó que
junto a su esposo, José Luis Herbas Ferrufino, son propietarios de un inmueble ubicado en la
comunidad de Pampa Mamata de la provincia Esteban Arze del departamento de Cochabamba; lugar
donde constituyeron su hogar familiar y como miembros de la misma, cumplen con todas sus
obligaciones de afiliados, ingresando al sistema de agua potable como socios activos, cancelando por
el servicio de forma puntual, el consumo que emerge de la lectura del medidor de agua instalado en su
domicilio.

El dirigente Florentino Veizaga Hidalgo convocó a los habitantes de la comunidad a una reunión a
efectuarse el 3 de diciembre de 2011, en la que informó que los terrenos tenían que ser saneados por
el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA); entonces Ayda Claros miembro de la comunidad
indicó, que el título de propiedad que se otorga especifica “no transferible en letras pequeñas” y que
varios compañeros tienen documentos de propiedad y no necesitan de ese procedimiento, causando
descontento en la autoridad, quien salió de la reunión acompañado de varios comunarios
interrumpiendo el uso de la palabra; el hijo de la accionante Derwin Herbas Jimenez, textualmente
dijo: “Que clase de dirigente es, él siempre habla de respeto y el es quien no respeta cuando las
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 402
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

personas hacen uso de la palabra y la gente como ignorantes se salen”, siendo desvirtuado por gente
de la Comunidad quienes señalaron que era una agresión verbal para el dirigente. Posteriormente,
sucedió otro incidente con la secretaria del dirigente, supuestamente insultando a este último.

En la reunión convocada para el 17 de diciembre de 2011, Florentino Veizaga Hidalgo expresó a los
compañeros “si le van a hacer respetar o no” por las supuestas críticas a su persona. Tito Ferrufino
Guillen y Gerardo Hinojosa Ayala, sentaron en acta la imposición de la sanción de corte de agua y
multa de Bs500.- (quinientos bolivianos), a causa de un terreno que la accionante cuidaba que estaba
en juicio con la suegra del referido dirigente; asimismo, le excluyeron de la lista de afiliados
argumentando ser enemiga de la comunidad. Sin escuchar su pedido de no proceder al corte del
servicio, se trasladaron los tres demandados a su propiedad y en actitud arbitraria e ilegal, se llevaron
su medidor, privándole del servicio de agua potable, hechos cometidos en presencia de varios
comunarios.

A pesar de sus súplicas de restitución de acceso irrestricto al agua potable, su pedido fue negado
rotundamente, utilizando como fundamento que esa sanción fue impuesta por insultar a un dirigente.
El 23 de diciembre del 2011, el dirigente autorizó la conexión de agua potable sólo por las fiestas de
fin de año -del 24 de diciembre de 2011 al 1 de enero de 2012-; sin embargo el “Presidente de Agua
Potable” se negó, alegando que la comunidad estaba enojada. Al día siguiente se le devolvió el
medidor que conectó por cuenta y costo suyo.

El 2 de enero de 2012, hubo otra reunión en la cual el Presidente consultó a la comunidad si la


sanción impuesta debía cumplirse, a lo que la accionante se mantuvo en silencio por miedo a
represalias, el dirigente de la Comunidad Pampa Mamata le propuso que haga los “machones de la
sede de la comunidad”, y no aceptando ese chantaje, se le cortó el servicio de agua potable por
segunda vez hasta la fecha, pero sin llevarse el medidor y asegurando el mismo con alambre,
amenazándola con cortarle por tres meses más si su esposo José Luis Herbas Ferrufino, hablaba mal
de la comunidad en Estados Unidos.

Florentino Veizaga Hidalgo, en calidad de autoridad arrastró en las ilegalidades cometidas a los
codemandados, olvidando su condición de autoridad y guía; los actos de represalia cometidos por su
persona, asumidos por los conflictos suscitados con su suegra, no tienen justificativo alguno por ser
arbitrarios e ilegales.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante considera vulnerados sus derechos a la vida, a la salud y el acceso irrestricto al agua
potable, citando al efecto los arts. 15.I, 16.I y 18.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita conceder la acción planteada, disponiendo en Resolución: a) La inmediata restitución del


servicio de agua potable en su favor; b) El cese inmediato de los actos cometidos por los
denunciados; c) La remisión de antecedentes al Ministerio Público para el inicio de proceso penal
contra los demandados por los hechos delictivos cometidos; y, d) La imposición de costas y
multas.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 18 de enero de 2012, ante el Juez Mixto y de Sentencia de Tarata
de la provincia Esteban Arze del Tribunal Departamental de Judicial de Cochabamba, según consta
en el acta cursante de fs. 23 a 24, se produjeron los siguientes actuados:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 403
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.1. Ratificación de la acción

La abogada de la accionante se ratificó in extenso en los términos expuestos en su memorial de


interposición de la acción.

I.2.2. Informe de las autoridades y personas demandadas

Florentino Veizaga Hidalgo, en audiencia informó lo siguiente: “La comunidad en conjunto habría
actuado, los mismos que se encuentran presentes a fin de hacer respetar a sus autoridades, y que el juicio
sería contra toda la comunidad y no solo con su persona”.

Por su parte, el codemandado, Gerardo Hinojosa Ayala, refirió que no estaba presente en el corte
del grifo, los dirigentes solamente obedecen a lo que dice la comunidad, en su condición de Cajero
sólo cobra; además, señala que la accionante es problemática, mentirosa y que agredió verbalmente
a los dirigentes y a la comunidad, anteriormente -16 de octubre de 2011- le sancionaron con el
corte de agua por tres meses y que al constar en varias actas las agresiones de la accionante, fue la
razón por la cual se le cortó el servicio de agua potable.

I.2.3. Resolución

El Juez Mixto y de Sentencia de Tarata, constituido en Juez de garantías, mediante Resolución de


18 de enero de 2012, cursante de fs. 25 a 27 vta., concedió la acción de amparo constitucional, con
el fundamento que, si bien el sistema de servicio de agua potable de la comunidad de Pampa
Mamata es comunitario, no inhibe de que cuente con un Estatuto y Reglamento correspondiente,
que establezca las condiciones y causas, para sancionar al usuario con el corte del servicio, que en
ningún caso puede estar en discordancia con lo que manda la Constitución Política del Estado,
siendo un despropósito que la comunidad representada por sus dirigentes, conforme a las diversas
actas, impongan sanciones inhumanas e irracionales, como el corte del servicio de agua potable
para consumo humano, que oscile entre tres y seis meses. Además, por intermedio del “Cajero o
Cobrador del Servicio”, de manera ilegal cobraron por el servicio del mes de diciembre de 2011,
sin considerar el corte del servicio y su falta de suministro.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. En el Libro de Actas 1 del Sindicato Agrario Pampa Mamata, se evidencia que cursa el acta de
posesión de 23 de octubre de 2010, haciendo referencia en el punto 4, a Elsa “Jimenes” de Herbas “los
comunarios fueron a cortar su pileta para 3 meses” y previa disculpa pagó una multa de Bs100.- (cien
bolivianos), faltando un reintegro de Bs50.- (cincuenta bolivianos) (p. 72 del Anexo).

II.2. Por acta de reunión de emergencia de 25 de marzo de 2011, consta que en la comunidad de
Pampa Mamata, se acostumbraba tomar la medida de “corte de pileta definitivo” (p. 103 del
Anexo).

II.3. En acta de reunión de fecha ilegible, por el contenido de la misma se deduce que el 17 de
enero de 2012, los comunarios siendo notificados con la audiencia por el Juzgado, en el caso de
Elsa Jimenez de Herbas, acordaron asistir en respaldo de sus representantes (p.160 del Anexo).

II.4. En obrados se encuentra el certificado de matrimonio de José Luis Herbas Ferrufino y Elsa
Jimenez Nina, de 23 de febrero de 1990 (fs. 1 del expediente), asimismo la existencia de minuta de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 404


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

transferencia de 7 de noviembre de 2000, de un lote a favor de José Luis Herbas Ferrufino (fs. 4 y
vta. del expediente).

II.5. Recibos de pago de consumo de agua de los meses de octubre y noviembre, cancelados en
fechas 15 de diciembre y 15 de noviembre de 2011 respectivamente (fs. 2 a 3 del expediente).

II.6. Cursan fotografías en las que se observa el cierre de la llave de paso de agua, con la presencia
de varias personas (fs. 7 a 10 del expediente).

II.7. Del informe prestado en audiencia por los demandados se colige que se sancionó a la
accionante con el corte del servicio de agua potable por tres meses y que la comunidad en su
conjunto habría participado es este hecho (fs. 23 vta. a 24 del expediente).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante alega que se han vulnerado sus derechos a la vida, a la salud y el acceso irrestricto al
agua potable, por parte de los demandados que procedieron ilegalmente a cortarle el servicio de
agua potable e imponerle una multa, por supuestas diferencias con el dirigente de la comunidad. En
consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es una acción tutelar de carácter extraordinario, cuya finalidad
es la protección de los derechos fundamentales de las personas, establecida en el art. 128 de la
CPE, procede: “…contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley”.

Previamente a ingresar al análisis de la problemática planteada, cabe aclarar que, conforme ha


definido este Tribunal en su jurisprudencia, una de las características inherentes a la naturaleza
jurídica de la acción de amparo constitucional es la subsidiaridad, lo que significa que esta vía
tutelar sólo se activa cuando la persona no tiene o no cuenta con ningún otro recurso o vía legal
para la reparación inmediata, efectiva e idónea de sus derechos fundamentales o garantías
constitucionales vulnerados por actos u omisiones ilegales o indebidas, salvo que la restricción o
supresión de los derechos o garantías constitucionales ocasione un perjuicio irremediable o
irreparable, en cuyo caso, de manera excepcional, se activa esta acción de defensa para otorgar una
tutela efectiva e inmediata.

La jurisprudencia constitucional desarrollada en la SC 0327/2001-R de 16 de abril, estableció el


carácter subsidiario de la acción de amparo constitucional, señalando que: “… sólo puede ser
interpuesto cuando se han agotado todos los recursos o cuando el que franquea la Ley no presta
con inmediatez y efectividad la protección requerida ante un daño inminente e irreparable…”
(el resaltado y subrayado es añadido).

El Tribunal Constitucional a través de la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre, sostuvo que la


acción de amparo constitucional constituye un instrumento subsidiario y supletorio “…en la
protección de los derechos fundamentales, subsidiario porque no es posible utilizarlo si es que
previamente no se agotó la vía ordinaria de defensa y supletorio porque viene a reparar y reponer
las deficiencias de esa vía ordinaria”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 405


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Siguiendo con la citada Sentencia Constitucional, el Tribunal Constitucional estableció reglas y


sub reglas de improcedencia de la acción de amparo constitucional por su carácter subsidiario, por
el que no procederá cuando: “1) las autoridades judiciales o administrativas no han tenido la
posibilidad de pronunciarse sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un medio de defensa
ni ha planteado recurso alguno, así: a) cuando en su oportunidad y en plazo legal no se planteó un
recurso o medio de impugnación y b) cuando no se utilizó un medio de defensa previsto en el
ordenamiento jurídico; y 2) las autoridades judiciales o administrativas pudieron haber tenido o
tienen la posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios de defensa, así: a)
cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se daría en casos de planteamientos
extemporáneos o equivocados y b) cuando se utilizó un medio de defensa útil y procedente para la
defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo no se agotó, estando al momento de la
interposición y tramitación del amparo, pendiente de resolución. Ambos casos, se excluyen de la
excepción al principio de subsidiaridad, que se da cuando la restricción o supresión de los
derechos y garantías constitucionales denunciados, ocasionen perjuicio irremediable e
irreparable, en cuya situación y de manera excepcional, procede la tutela demandada, aún
existan otros medios de defensa y recursos pendientes de resolución”.

III.2. Amparo excepcional ante un perjuicio irremediable o irreparable

En la SC 0119/2003-R de 28 de enero, recordando la naturaleza jurídica de la acción de amparo


constitucional y su carácter subsidiario, se estableció que a pesar de la existencia de otros medios o
recursos legales, procederá esta vía tutelar cuando exista el peligro de que los efectos de las
decisiones impugnadas sean irremediables e irreparables, indicando que: “…la restricción o
supresión de los derechos o garantías constitucionales ocasione un perjuicio irremediable o
irreparable, en cuyo caso, de manera excepcional, se activa el Amparo Constitucional para
otorgar una tutela efectiva e inmediata que evite la consecuencia irremediable.

(…)

“…existiendo el peligro de que los efectos de las decisiones impugnadas sean irremediables o
irreparables, este Tribunal considera aplicable la excepción a la regla de la subsidiaridad…”.

El Tribunal Constitucional, en la SC 0651/2003-R de 13 de mayo, moduló la jurisprudencia


constitucional, precisando los casos y condiciones en los que se activa esta acción de defensa por la
vía de la excepción a la regla de la subsidiariedad, estableciendo que:“…el principio de
subsidiariedad que el orden constitucional informa al recurso de amparo constitucional, cede al
principio de inmediatez en los supuestos en que no existan otros medios o recursos idóneos o
eficaces para la protección de los derechos o garantías invocados como restringidos, suprimidos
o amenazados; esto determina que, en los casos en que el agotamiento de las vías ordinarias
existentes se constituya en un obstáculo formal para acceder a la protección con la inmediatez
que el caso singular exige, en razón a que la apertura posterior de la tutela resultaría
irreparable por tardía; atendiendo al fin de protección de la norma y a la eficacia que reclama
todo derecho o garantía fundamental; en tales supuestos no es exigible el agotamiento de las vías
ordinarias, abriéndose, consecuentemente la jurisdicción constitucional para otorgar en su caso,
la tutela invocada, dado que, como lo ha establecido la jurisprudencia de este Tribunal '[..] el
amparo no sólo procede cuando no existe otra vía legal para la tutela de los derechos
conculcados, sino también, en los casos en que aquella resulta ineficaz, por tardía, para proteger
el derecho fundamental conculcado o amenazado; asimismo, debe establecerse si el recurrido o
sujeto pasivo del amparo se encuentra por razones de hecho en una clara situación de poder
respecto al recurrente'" (SSCC 1010/2002-R, 0158/2001-R y 1017/2002-R), extremo aplicable al
caso de autos, en el que la accionante pese a sus reiteradas solicitudes de dejar sin efecto la sanción
de corte del servicio de agua potable, no prosperaron, por lo que no existiendo un medio eficaz
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 406
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

para la protección de sus derechos, resultando esa vía de reclamo ineficaz, es aplicable al caso el
principio de inmediatez del amparo constitucional.

El Tribunal Constitucional a través de la SC 0864/2003-R de 25 de junio, definió los alcances del


daño irremediable, circunstancia a tomarse en cuenta para otorgar excepcionalmente la tutela
solicitada en la acción de amparo constitucional, indicando que: “…la procedencia del amparo
para evitar un daño o perjuicio irremediable, lo que supone que de no otorgarse la tutela al
derecho o garantía constitucional vulnerados hay inminencia de un mal irreversible, injustificado
y grave, que coloque al recurrente en un estado de necesidad, que justifica la urgencia de la
acción jurisdiccional, ya que de continuar las circunstancias de hecho en que se encuentra el
recurrente, es inminente e inevitable la destrucción de un bien jurídicamente protegido, lo que
exige una acción urgente para otorgar la protección inmediata e impostergable por parte del
Estado en forma directa”.

En este sentido la SC 0559/2010-R de 12 de julio, flexibilizó los requisitos para considerar la


situación como medida de hecho, contenidos en la SC 0148/2010-R de 17 de mayo, estableciendo
que cuando se produzca una amenaza, afectación o restricción al derecho al agua, por su estrecha
vinculación con el derecho a la vida, la salud y la dignidad humana se presume un daño inminente
e irreparable, por lo que a efectos de viabilizar su tutela sólo se requiere que el afectado acredite
objetivamente el acto lesivo a producirse o que fuere consumado a través del ejercicio de una
medida o vía de hecho.

III.3. Derecho al agua: ejercicio individual y colectivo

Con relación al derecho al agua la Constitución Política del Estado lo ha instituido como un
derecho humano que tiene toda persona, de acceso universal y equitativo a los servicios básicos lo
que incluye el acceso al agua potable (arts. 16.I, 20.I de la CPE).

El derecho al agua tiene una doble dimensión constitucional, tanto como un derecho individual
fundamental como un derecho colectivo comunitario fundamentalísimo, que está reconocido en
el texto constitucional como en instrumentos internacionales, cuya tutela y protección no debe
responder a una visión antropocentrista y excluyente; en este sentido por la naturaleza de este
derecho en su ejercicio individual, no puede arbitrariamente ser restringido o suprimido
mediante vías o medidas de hecho en su uso racional como bien escaso por grupo social alguno -
sea una comunidad campesina o sea una colectividad diferente- ni tampoco por persona
particular.

III.4. Los derechos a la vida y a la salud: alcances

El art. 15.I de la CPE, refiere que toda persona tiene derecho a la vida; entendido éste como un
derecho fundamental del cual emergen los demás derechos y como: “…el derecho de toda persona
al ser y a la existencia, siendo su característica esencial la base para el ejercicio de los demás
derechos. Es decir, la vida misma es el presupuesto indispensable para que haya titularidad de
derechos y obligaciones. Es un derecho inalienable de la persona que obliga al Estado en dos
sentidos: su respeto y su protección. La autoridad estatal está constitucionalmente impedida de
hacer cosa alguna que destruya o debilite el contenido esencial de esos derechos, debiendo crear
las condiciones indispensables para que tengan cabal observancia y pleno cumplimiento” (SC
0653/2010-R de 19 de julio, haciendo mención a la SC 1294/2004-R de 12 de agosto).

Por su parte el art. 18 de la CPE, señala el derecho a la salud como una garantía que otorga el Estado a
toda persona para que cuente con protección y cuidado, desarrollado a través de la ya citada SC
0653/2010-R cuando expresa: “…los arts. 35 al 44, de dicha norma Suprema Sección II 'La salud y a la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 407
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

seguridad social' del Capítulo Quinto sobre los 'Derechos Sociales y Económicos', Título Segundo
'Derechos Fundamentales y garantías', de la Primera Parte de la 'Bases Fundamentales del Estado,
Derechos, Deberes y Garantías'. Derecho, sobre cuyo entendimiento este Tribunal en la SC 0026/2003-
R de 8 de enero, estableció que: 'es el derecho en virtud del cual la persona humana y los grupos
sociales -especialmente la familia- como titulares del mismo, pueden exigir de los órganos del Estado,
en cuanto sujetos pasivos, que establezcan las condiciones adecuadas para que aquellos puedan
alcanzar un estado óptimo de bienestar físico, mental y social y garanticen el mantenimiento de esas
condiciones. El derecho a la salud no significa solamente el derecho a estar en contra de la enfermedad
sino el derecho a una existencia con calidad de vida'”.

III.5. El derecho al acceso al servicio básico de agua potable

En el actual orden constitucional el derecho al agua es considerado como un derecho


fundamental, tal cual se desprende del art. 16.I de la CPE, cuando dispone que: "Toda persona
tiene derecho al agua y a la alimentación", por lo que el Estado reconoce y garantiza el ejercicio
de este derecho y del acceso universal y equitativo al servicio básico de agua potable (art. 20.I
de la CPE).

“El derecho al acceso a los servicios básicos de agua potable y electricidad está reconocido y
consagrado como derecho fundamental por el art. 20.I de la CPE, dentro de los principios de
universalidad y equidad; es decir, que los servicios básicos como responsabilidad del Estado en
todos los niveles de gobierno de manera directa o mediante contratos con empresas privadas
como prevé el parágrafo II de la citada norma constitucional, no deben ser restringidos en el
acceso por motivos o causas más allá de las previstas por las normas o procedimientos para tal
efecto”; entendimiento asumido en la SC 0071/2010-R de 3 de mayo.

III.6. Análisis del caso concreto

La accionante a través de su acción de amparo constitucional alega que los demandados cortaron el
suministro de agua potable en su domicilio como sanción impuesta arbitrariamente; además, de la
obligación del pago de una multa, y pese a la inexistencia del servicio, procedieron al cobro del
mismo y no obstante, a que el dirigente autorizó la conexión únicamente por las fiestas de fin de
año, se procedió nuevamente a su corte, alegando que tal situación se mantuvo hasta el momento
de la interposición de la acción de amparo constitucional.

De la revisión de los antecedentes de la presente acción de amparo constitucional, se evidencia que


pese a la inexistencia de un debido proceso previo, se impuso a la accionante, que tiene su
domicilio en la comunidad de Pampa Mamata, una sanción consistente en el corte del suministro
de agua potable y la imposición de una multa.

Además, encontrándose cortado el servicio de suministro de agua potable en el domicilio de la


accionante como sanción, contradictoriamente se siguió procediendo al cobro por concepto de
consumo de agua potable, dando lugar a una falta de correspondencia entre la prestación del
servicio y el pago por el suministro, aspecto que resulta inexplicable.

Es decir, el corte del suministro del servicio de agua potable, mediante vías de hecho trajo en el
presente caso como lógica consecuencia, la vulneración del derecho fundamental al agua en su
dimensión individual, derecho que en el contexto del diseño constitucional es autónomo a los
derechos a la vida y a la salud por lo que per se puede tutelarse de manera independiente, lo que no
implica que de acuerdo al caso concreto también pueda vulnerarse de manera conjunta a los
derechos a la vida y a la salud, invocados en la presente acción.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 408


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En este marco, respecto al derecho a la vida y a la salud, es necesario aclarar que esta vía
constitucional podría otorgar en el caso concreto la tutela siempre y cuando la accionante hubiese
generado alguna duda en este Tribunal a través de algún medio de prueba que permita inferir que
su derecho a la vida o salud, fueron en su núcleo esencial efectivamente amenazados, restringidos
o suprimidos, aspecto que no sucede en el presente caso, máxime si se considera el trascurso del
tiempo en que se encontraba privado del derecho de acceso al servicio básico de agua potable,
aspecto que hace inferir a este Tribunal que la accionante tenía acceso al agua mediante otras vías
de provisión; es decir, que incumplió en este caso con la carga probatoria, tal como se estableció en
reiterada jurisprudencia constitucional, al señalar que: “...este Tribunal ha establecido que la
determinación del Tribunal de amparo debe obedecer a la certidumbre sobre si en efecto se ha
violado o amenazado un derecho fundamental y/o garantía constitucional, por lo que es preciso
que el recurrente o agraviado, por una parte, aporte los elementos de prueba suficientes en los que
se acredite y demuestre la existencia del acto y/u omisión denunciado de ilegal, y por otra, ese
agraviado también debe acreditar que en el supuesto acto y/u omisión es responsable la autoridad
o persona recurrida por haber tenido intervención y decisión” (SC 1651/2003-R de 17 de
noviembre); aspecto que sin embargo, no impide en este caso la tutela del derecho fundamental de
acceso al servicio de agua potable necesario además para el riego, el mantenimiento de animales,
entre otras actividades.

De manera que, con el corte del suministro de agua potable como una vía de hecho, se restringe el
derecho fundamental de acceso al servicio de agua potable, en su modalidad de derecho
fundamental individual, toda vez que, el agua es el líquido elemento esencial para el desarrollo y
supervivencia humana, por lo que su suministro no puede estar supeditado al conflicto que pudiera
haber entre particulares.

Al haberse privado a la accionante del derecho fundamental de acceso al servicio básico de agua
potable, se lesionó este derecho, en consecuencia la sanción impuesta provoca un daño irreparable,
ante la cual, la justicia constitucional a través de la acción de amparo constitucional se ve impelida
a otorgar tutela evitando así, se siga consumando la vulneración de los derechos invocados.

Finalmente, referir que en este caso corresponde la imposición de costas en el marco del art. 79.5
de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP) por el tiempo que se privó de agua a la
parte accionante, el manejo discrecional de este servicio público en la población en la cual se
originó la acción tutelar, la constancia de reiteración de vías de hecho en la referida población, la
falta de consideración a la dignidad de la parte accionante por el cobró de los meses que no se le
brindó el servicio, desconociéndose la dignidad que merece toda persona, incluso si en el caso
concreto existiese una condena o sanción, la misma no podría consistir en la privación del líquido
elemento, pese a ello debe aclararse que, si la parte accionante considera pertinente la reparación
de daños y perjuicios, que incluya el daño emergente y el lucro cesante, al requerir esta una etapa
probatoria amplia en su caso, deberá acudir ante la jurisdicción ordinaria civil.

En consecuencia el Juez de garantías al conceder la acción tutelar, ha actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de las atribuciones que le confiere
la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º CONCEDER la tutela solicitada, únicamente en cuanto al derecho fundamental de acceso al


servicio de agua potable, en su modalidad de derecho fundamental individual.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 409


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

2º Disponer la imposición de costas procesales a la parte demandada a ser calificadas por el Juez
de garantías, dejando sin efecto la multa impuesta por esta autoridad, conforme se preciso en el
ultimo párrafo del Fundamento Jurídico III.6.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez .-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0055/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00159-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 01/2012 de 17 de febrero, cursante de fs. 24 a 26, pronunciada, dentro de la


acción de libertad interpuesta por Chinthya Noemi Vilte Soria contra Carlos Guerrero Arraya,
Juez Primero de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 16 de febrero de 2012, cursante de fs. 2 a 4 y vta., la accionante señala
que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El Juez Primero de Instrucción en lo Penal Cautelar, mediante Resolución 553/2011 de 12 de agosto,


dispuso la aplicación de medidas sustitutivas a la detención preventiva; pero habiéndose interpuesto
apelaciones incidentales a la referida determinación, la Sala Penal Tercera del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz, por Auto de Vista 492/2011 de 30 de diciembre, revocaron la
resolución apelada, disponiendo la detención preventiva con bastantes irregularidades, existiendo
defectos de forma y fondo.

Se solicitó la cesación de la detención preventiva, misma que fue rechazada sin argumento válido,
limitándose el juzgador a señalar que ha existido contradicción en el domicilio, sin verificar que en su
“cedula de identidad se inscribe con claridad su domicilio habitual” (sic), misma que guarda relación
con los actos investigativos.

De la lectura al Auto de Vista, se establece que los Vocales no han fundamentado adecuadamente su
Resolución por cuanto no cumple con lo previsto por el art. 124 del Código de Procedimiento Penal
(CPP), evidenciándose una completa contradicción en la redacción en los puntos uno y dos.

Por otra parte, se ha reiterado en varias oportunidades que no existe una individualización correcta
sobre los partícipes y cual la participación en la comisión de los supuestos delitos, más aún si en la
imputación formal se tipifica provisionalmente el delito de legitimación de ganancias ilícitas sin
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 410
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecerse que tenga alguna propiedad registrada a su nombre por cuanto no posee patrimonio
alguno.

Finalmente, otro elemento que devela la falta de fundamentación del referido Auto de Vista, se
basa en el hecho de una errónea aplicación del principio de vinculiaridad entre el hecho sucedido
y la responsabilidad de los apelantes, los Vocales se limitan únicamente a indicar que se ha
cumplido con este principio sin indicar cuáles son los elementos de convicción que ha
considerado el Juez a quo al momento de determinar la concurrencia del requisito establecido en
el art. 233. 1, 234 y 235 del CPP.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante alega la vulneración de los derechos a la libertad física y al debido proceso,


citando al efecto, los arts. 22 y 23.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Se solicita se “otorgue” la tutela, disponiéndose se dicte una nueva resolución acorde a


procedimiento.

I.2. Audiencia y Resolución del Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 22 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante de fs. 22
a 23 de obrados, se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante ratificó su demanda y amplió la misma, señalando que: a) El Juez demandado al


momento de rechazar la cesación a la detención preventiva, no pone énfasis en los peligros procesales
de los art. 234 y 235 del CPP; se establecen 10 incisos, pero en ninguna parte se menciona cual es el
peligro procesal específico en la que incurre la imputada; b) No existe causal de revocatoria para
aplicar una “medida más gravosa”; y, c) Se ha cumplido con el principio de subsidiaridad, porque la
resolución está en un Auto de Vista emergente de una apelación incidental.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Carlos Guerrero Arraya, Juez Primero de Instrucción en lo Penal, en audiencia informó que: 1) Se
dispuso medidas sustitutivas a la detención preventiva y que en la presente acción no hará valoración
de lo que corresponde a una medida cautelar; y, 2) En la tramitación hubo recusación a nivel de la
Sala Penal Tercera, pero no es inexistente esa actuación como refiere el abogado accionante (sic.).

I.2.3. Participación del Ministerio Público

El representante del Ministerio Público indicó que, la Sala Penal Tercera si hubiese impuesto una
medida más gravosa, los Vocales debieron prestar informe, porque a criterio de la parte accionante, la
resolución no fue correctamente valorada y fundamentada, siendo que, fueron estas autoridades
quienes privaron de libertad a la imputada, por lo que requiere que se deniegue la tutela.

I.2.4. Resolución

Mediante Resolución 01/2012 de 17 de febrero, cursante de fs. 24 a 26, la Jueza Segunda de


Sentencia, concedió la acción de libertad, disponiendo que el Juez demandado, tome en cuenta
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 411
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

los principios constitucionales y procesales establecidos en la Constitución Política del Estado y


dicte en el plazo de 72 horas, nueva Resolución, valorando los antecedentes, así como el Auto
emitido en primera instancia por su autoridad, determinándose así la situación procesal de la
ahora accionante; en base a la siguiente fundamentación: se ha vulnerado el debido proceso, al
evidenciarse que la resolución dictada por la autoridad demandada, habría tenido como
fundamento para el rechazo de la cesación a la detención preventiva, el Auto de Vista dictado
por la Sala Penal Tercera, conforme a la jurisprudencia, se debió fundamentar las razones por las
cuales se dispone que los sindicados se encontraron dentro de los alcances de los arts. 234 o 235
del CPP y exponer los elementos de convicción concretos en las que apoyan tal decisión, al no
haberse cumplido aquello, se incurrió en un acto ilegal.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Dentro de la investigación por la presunta comisión de los delitos de tráfico de sustancias
controladas y legitimación de ganancias ilícitas, por Resolución 553/2011 de 12 de agosto, el Juez
Primero de Instrucción en lo Penal Cautelar, dispuso medidas cautelares para la ahora accionante y la
detención preventiva para otros imputados (fs. 9 a 16).

II.2. Mediante Resolución 492/2011 de 30 de diciembre, la Sala Penal Tercera, revocó en parte la
Resolución 553/2001, disponiendo la detención preventiva de la ahora accionante en el centro
Penitenciario Femenino de Miraflores (fs. 17 a 21 y vta.).

II.3. No cursa en el expediente procesal, la resolución que rechaza la cesación a la detención


preventiva, también impugnada mediante la presente acción.

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

La accionante alega la vulneración de sus derechos, siendo que: i) La Sala Penal Tercera, mediante
Auto de Vista 492/2011, revocó la resolución que dispuso medidas sustitutivas, sin cumplir lo
previsto por el art. 124 del CPP; además de no señalar cuáles son los elementos de convicción que ha
considerado el Juez a quo al momento de determinar la concurrencia del requisito establecido en los
arts. 233. 1, 234 y 235 del CPP; ii) La cesación de la detención preventiva, fue rechazada sin
argumento válido, limitándose el juzgador a indicar que ha existido contradicción en el domicilio,
como también considera con mayor relevancia las apreciaciones de los Vocales, sin tomar en cuenta
los elementos probatorios que se presentaron; y, iii) No existe una individualización correcta sobre los
participes y la comisión de los supuestos delitos.

En consecuencia, corresponde analizar, si en el presente caso, se debe ingresar o no al fondo de la


problemática planteada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

La acción de libertad, es un mecanismo de defensa constitucional extraordinario de carácter


preventivo, correctivo y reparador, instituido para la protección inmediata y efectiva de los derechos
fundamentales a la libertad física como de locomoción en casos de detenciones, persecuciones,
apresamientos o procesamientos ilegales o indebidos por parte de servidores públicos o de personas
particulares; así como a la vida, cuando ésta se encuentra afectada o amenazada por la restricción o
supresión de la libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 412


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Está consagrada por el art. 125 de la CPE, cuando dispone que: “Toda persona que considere que su
vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de
libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente
en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

Norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP), la cual establece que el objeto de esta acción extraordinaria es la garantía, protección o tutela
de los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de
restricción o supresión.

Teniendo presente la importancia de los derechos primarios protegidos como son la vida y la libertad
física, de manera general no se encuentra regida por el principio de subsidiariedad; al contrario, se
activa sin el previo agotamiento de las vías legales ordinarias, es de tramitación especial y
sumarísima, reforzada por sus características de inmediatez en la protección, sumariedad,
informalismo, generalidad e inmediación; procede contra cualquier servidor público o persona
particular y tampoco reconoce fueros ni privilegios, correspondiendo conocer y resolver dicha acción
constitucional al juez en materia penal, debido al principio de especialidad reconocido en la Ley
Fundamental.

De manera excepcional opera el principio de subsidiariedad ante la existencia de medios de


impugnación específicos e idóneos para restituir de manera inmediata los derechos objeto de su
protección, o bien cuando se activa de manera paralela un medio de defensa previsto en el
ordenamiento jurídico tanto en la vía constitucional como en la ordinaria.

III.2. Sobre la legitimación pasiva en la acción de libertad

Con referencia a la legitimación pasiva, se tiene que la misma, es la capacidad jurídica otorgada
a la autoridad, funcionario público o particular para comparecer ante el juez o tribunal de
garantías constitucionales a efectos de que emita un informe sobre los actos o hechos que
presuntamente vulneran derechos fundamentales y los cuales se encuentran alegados en la
acción constitucional.

Si bien no está explícitamente prevista por la Constitución Política del Estado ni la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (Ley 027), sin embargo, de un análisis objetivo a las
mismas en lo pertinente, se entiende que la acción de libertad se deberá plantear contra:

a) La autoridad o funcionario público que amenace, restrinja o suprima los derechos


fundamentales tutelados.

b) La persona particular que amenace, restrinja o suprima los derechos tutelados.


En este sentido la legitimación pasiva en la acción de libertad prevista por el art. 125 de la CPE,
está constituida por aquel o aquellos que hayan lesionado o afectado el ejercicio de los derechos
fundamentales bajo el alcance desarrollado en los Fundamento Juridico.III.1 de la presente
Sentencia, por lo que, se concluye que los actos lesivos contra los derechos tutelados pueden
provenir tanto de la autoridad pública -de cualquier naturaleza- como de los particulares, por
lo que a diferencia de la tesis restrictiva adoptada por el anterior Tribunal Constitucional (SSCC
0459/2001-R y 0865/2001-R) la Constitución Política del Estado vigente es mas garantista y
amplia en su alcance de protección efectiva, otorgando la posibilidad de interponer la acción de
libertad -como se dijo- inclusive contra particulares.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 413
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Ahora bien, ingresando a revisar la jurisprudencia constitucional respecto a la legitimación


pasiva y, encontrándonos bajo un nuevo ambiente constitucional y un nuevo órgano de control
de constitucionalidad como es este Tribunal Constitucional Plurinacional, es necesario en el caso
de aplicar y citar jurisprudencia constitucional que la misma no sea contradictoria y en todo
caso, sea compatible a la realidad plurinacional, los valores y principios previstos en la Ley
Fundamental, así la SCP 0003/2012 de 13 de marzo, estableció que: “(…) ello no impide la
aplicación de jurisprudencia constitucional anterior, claro está, siempre y cuando no
contradiga y no sea incompatible con el espíritu plurinacional, los principios y valores de la
Norma Suprema; jurisprudencia que ira mutando según se vaya desarrollando y consolidando
el nuevo sistema de justicia plurinacional que se implementará a partir de la nueva Ley
Fundamental, que es la principal instancia legitimadora del modelo de Estado de Derecho
Plurinacional.

En este sentido, la trascendencia fundacional, moral, jurídica, política, institucional de


derechos y del sistema de justicia, deberá constituir como punto de partida de la nueva doctrina
y jurisprudencia constitucional, que dé solidez al nuevo ambiente constitucional, misma que
será necesariamente de forma progresiva y según las controversias jurídicas y políticas que
lleguen a este Tribunal Constitucional Plurinacional, aclarando nuevamente que, la
jurisprudencia del anterior Tribunal, será aplicable únicamente cuando sea compatible y
coherente con la Constitución”.

Bajo esta lupa, la jurisprudencia constitucional ahora aplicable, ha establecido para plantear la
acción de libertad, entre otras cosas que:

1) La acción sea dirigida contra la autoridad que impartió o ejecutó la orden que dio lugar a la
persecución, aprehensión, detención, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales (SC
1651/2004-R de 11 de octubre y reiterada por la jurisprudencia emitida por el Tribunal
Constitucional del 2010 y 2011).

2) De manera general, estableció que legitimación pasiva “… se adquiere por la coincidencia


que se da entre la autoridad que presuntamente causó la violación a los derechos y aquélla
contra quien se dirige la acción…” (SC 0103/2010-R de 10 de mayo y SC 0691/2001-R de 9
de julio).

Al margen de lo anotado esta acción se rige por su carácter de informalismo, que es inherente a
su naturaleza jurídica en función a los derechos que protege; en coherencia con ello, también se
estableció que cuando la acción se dirige, por error, contra una autoridad diferente a la que causó
la lesión, pero de la misma institución, rango o jerarquía e idénticas atribuciones, es posible
conceder la tutela, si se verificase lesión al derecho a la libertad personal. La aplicación del
referido razonamiento, no es viable cuando la presunta lesión de restricción de libertad o su
amenaza, hubiese sido dispuesta u ordenada, por una autoridad distinta a la demandada y que
además no pertenezca a la misma institución o fuera de rango, jerarquía o atribuciones distintas
que el demandado (Razonamiento asumido por las SSCC 0790/2010-R y 1094/2010-R).

III.3. Sobre la subsidiaridad en la acción de libertad

La SC 0008/2010-R de 6 de abril, ha establecido que la acción de libertad, se configura como un


medio de defensa idóneo para la protección efectiva y real de derechos fundamentales vinculados a la
vida, libertad y procesamiento indebido que amenace, supriman o restrinjan estos derechos, frente a
otros mecanismos ineficaces.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 414


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo que, “…en caso de existir norma expresa que prevea mecanismos intra-procesales efectivos y
oportunos de defensa de estos derechos fundamentales, deben ser utilizados previamente antes de
activarse la tutela constitucional, aspecto que se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en
los arts. 8 de la Declaración Universal de Derechos Humanos y 25 de la Convención Americana de
Derechos Humanos”.

Conforme a lo establecido, en la referida Sentencia Constitucional, se han establecido los supuestos


en los que es posible acudir directamente a la acción de libertad o en su caso, agotar previamente los
medios existentes:

“I. El recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, es el medio idóneo y eficaz para conocer y
restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a la vida, la libertad o
constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o ponga en peligro el derecho a la
libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar de existir mecanismos de
protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos resulten ser evidentemente
inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de defensa, por la urgencia de la
situación, se configura como el medio más eficaz para restituir los derechos afectados; empero, en
caso de existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y
oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben
ser utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad
operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse
agotado estas vías específicas.

II. Asimismo, cuando exista privación efectiva de libertad, por ser esta una causal grave, se
entenderá que la vía procesal existente no es idónea, cuando se pruebe que una vez activados estos
mecanismos procesales, su resolución y efectiva protección serán dilatadas, por ejemplo, por ser
irrazonables los plazos de resolución; por existir excesiva carga procesal para una rápida decisión o
ejecución de la decisión o por no cumplirse con los plazos para emisión de resoluciones establecidos
por la ley.

III. En el caso de vulneración al derecho a la vida, protegido por la acción de libertad, procederá
esta acción de forma directa y sin necesidad de agotar otra vía”.

En sentido, no será posible acudir a esta acción constitucional, cuando el ordenamiento jurídico
prevea otros medios de impugnación específicos, idóneos y efectivos para restituir el derecho a la
libertad física o personal, en forma inmediata. Conforme a esto, solamente una vez agotado tal medio
de defensa previsto en la ley, y ante la persistencia de la lesión, se podrá activar la jurisdicción
constitucional, invocando la tutela que brinda la presente acción especial.

III.4.El recurso previsto en el art. 251 del CPP, como medio idóneo de defensa.

El recurso de apelación incidental, es un medio ordinario de carácter procesal que la ley confiere a los
intervinientes o interesados agraviados por una resolución judicial destinado a buscar una
determinación justa, con la pretensión de una revisión integral o parcial de lo determinado, al
considerarse la existencia de un agravio o lesión.

En el Código de Procedimiento Penal, dentro del sistema de recursos e impugnaciones que otorga a
las partes en el proceso penal, establece el de apelación incidental contra las resoluciones que
dispongan, modifiquen o rechacen las medidas cautelares, que por su configuración procesal y su
propia naturaleza se refleja como un mecanismo sumarísimo y efectivo de protección contra
presuntas lesiones y restricciones al derecho a la libertad de los imputados y procesados, en el que el
Tribunal de alzada tiene la oportunidad de corregir, en su caso, los errores del inferior alegados; dado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 415
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que conforme prevé el art. 251 del CPP, (modificado por la Ley del Sistema Nacional de Seguridad
Ciudadana de 4 de agosto de 2003), una vez interpuesto este recurso, las actuaciones pertinentes
deben ser remitidas ante el Tribunal Departamental de Justicia en el término de 24 horas, debiendo el
Tribunal de apelación referido, resolver dicho recurso, sin más trámite y en audiencia dentro de los
tres días siguientes de recibidas las actuaciones.

Con referencia a la jurisprudencia constitucional y bajo el contexto del Fundamento Juridico.III.3 de


la presente Sentencia, se ha establecido que en los casos que la solicitud de la -cesación a la detención
preventiva- sea rechazada, el imputado y procesado tiene la oportunidad de utilizar y activar un
mecanismo previsto en el Código de Procedimiento Penal como es la apelación incidental establecida
en el art. 251; así entre otras, la SC 0861/2011-R, 6 de junio, indicó: “…el accionante, previamente a
acudir a una acción extraordinaria, en el caso presente, la acción de libertad, y considerar que la
Resolución 14/2010 de 14 de enero, que dispuso el rechazo de la solicitud de cesación de la
detención preventiva impuesta en su contra, vulneraba alguno de sus derechos fundamentales, debió
actuar conforme al art. 251 del CPP (modificado por la Ley 2494 del Sistema Nacional de Seguridad
Ciudadana), y tal cual lo expresa la Resolución impugnada; consecuentemente, interponer el recurso
de apelación incidental que dicha norma le faculta, y que es considerado un medio idóneo, adecuado
y apropiado, establecido expresamente en la ley para impugnar las medidas cautelares que vulneren
el derecho a la libertad del imputado…”

De lo expuesto, se concluye que el Código de Procedimiento Penal, ha previsto un mecanismo


expedito para la protección inmediata del derecho a la libertad del imputado y procesado. En
consecuencia, ese es el medio que previamente debe activarse en la justicia ordinaria para impugnar
los actos del juez que se consideren lesivos al derecho referido, en este caso ante el rechazo de una
cesación a la detención preventiva; pero no es producente de ninguna forma acudir directamente o
de manera paralela a la jurisdicción constitucional a través de la presente acción tutelar, garantía que
podrá ser utilizada únicamente cuando el tribunal superior en grado no haya reparado las lesiones
denunciadas. Por tanto, si se evidencia la existencia de procedimientos -aptos- para la efectiva
tutela del derecho que se dice vulnerado, bastara para que el Juez o Tribunal de garantías y en
su caso, el Tribunal Constitucional Plurinacional deniegue la acción de libertad; en coherencia
con la argumentación que antecede, la SCP 003/2012, de 13 de marzo, estableció que: “considerando
los nuevos retos de un Tribunal Constitucional Plurinacional, es importante no activar
innecesariamente esta jurisdicción, en la nueva coyuntura constitucional plurinacional, se ve la
necesidad de fortalecer otros aspectos inherentes al nuevo modelo de Estado plasmado en la Norma
Fundamental; por eso mismo, es imperioso que las controversias que podrían conllevar a suscitar
una acción constitucional, previamente sean resueltas y “respondidas” en las instancias
establecidas en nuestro ordenamiento jurídico, ya sea un vocal, un juez y el propio Ministerio
Público, pero claro está, antes de activar una acción tutelar” (negrillas nuestras).

III.5. Análisis del caso concreto

III.5.1. Sobre el Auto de Vista 492/2011 emitido por la Sala Penal Tercera

La accionante alega que, los Vocales de la Sala Penal Tercera, mediante Auto de Vista 492/2011,
revocaron la resolución que dispuso medidas sustitutivas, determinado por tanto, la detención
preventiva de la ahora accionante, sin cumplir lo previsto por el art. 124 del CPP; además de no
señalar cuáles son los elementos de convicción que ha considerado el Juez a quo al momento de
determinar la concurrencia del requisito establecido en los arts. 233. 1, 234 y 235 del CPP.

Ingresando al análisis del caso y según informan los datos del proceso, se tiene que, si bien la presente
acción planteada tiene como pretensión principal el señalamiento de una nueva audiencia de cesación
a la detención preventiva, sin embargo de ello, se constata que en el tenor del memorial de la acción
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 416
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de libertad se alega la vulneración de los derechos a la libertad y al debido proceso por parte de la
Sala Penal Tercera quienes pronunciaron el Auto de Vista 492/2011; en este sentido, si la accionante
se sentía agraviada por la referida resolución, debió ampararse en la interpretación y jurisprudencia
señalada en el Fundamento Jurídico III. 2 de la presente Sentencia, la acción debió ser dirigida contra
las autoridades que emitieron dicha resolución y quienes en definitiva impartieron la detención
preventiva revocando justamente las medidas sustitutivas que fueron dispuestas por el Juez cautelar;
consiguientemente, es ésta la instancia la cual tenía que ser demandada para efectivizar el alcance de
la legitimación pasiva, la cual -como se dijo- se adquiere por la coincidencia que se da entre la
autoridad que causó la vulneración del derecho y aquella contra quien se dirige la acción
constitucional; además de no ser aplicable en el presente asunto, la excepción prevista por la
jurisprudencia respecto a la legitimación pasiva, razón por la cual, sin necesidad de otras
consideraciones, la tutela debe denegarse al respecto.

III.5.2. Sobre la cesación a la detención preventiva

La accionante alega que la cesación de la detención preventiva, fue rechazada sin argumento válido,
tampoco considero los elementos probatorios que se presentaron; además de no existir una
individualización correcta sobre los participes y la comisión de los supuestos delitos.

Ahora bien, según informan los datos del proceso, se tiene que la accionante no apeló el rechazo de la
cesación a la detención preventiva interpuesta por la misma, pese de que nuestro sistema procesal
penal, otorga a las partes la posibilidad de activar la apelación incidental justamente contra las
resoluciones que dispongan, modifiquen o rechacen las medidas cautelares, en este caso la cesación a
la detención preventiva; medio de impugnación que por su configuración procesal y su propia
naturaleza se refleja como un mecanismo efectivo de defensa conforme se desprende del Fundamento
Jurídico III.4 de la presente Sentencia, razón por la cual, al existir un recurso de apelación específico
en el Código de Procedimiento Penal, las partes deben activar el mismo antes de acudir a la
jurisdicción constitucional, siendo que éste Tribunal, no puede ingresar al fondo de la problemática
planteada cuando existen vías especificas, igualmente satisfactorias para la protección del derecho
constitucional vulnerado o amenazado en la jurisdicción ordinaria, son estos mecanismos
intraprocesales que previamente deben ser suscitados para cualquier reclamo, y una vez se verifique
que no son subsanados o restablecidos los derechos, recién se podrá activar la acción de libertad.

En consecuencia, la acción de libertad no puede ser utilizada por la accionante para subsanar el hecho
de no haber apelado en su oportunidad la Resolución que rechaza la cesación a la detención
preventiva, por cuanto su negligencia no permite examinar actos vinculados a su pretensión jurídica;
es en este contexto que se ha determinado -como se dijo- que, al existir un medio idóneo y eficaz en
defensa contra las presuntas lesiones o restricciones al derecho a la libertad física, no corresponde
conceder la tutela que brinda esta acción por tener el accionante un medio de impugnación a su
alcance, como lo establece el art. 251 del CPP; lo contrario significaría desconocer una norma
específica para el efecto y a la autoridad llamada por ley, creando una vía procesal sustitutiva donde el
ciudadano se encontraría en la condición de elegir el camino de su preferencia, aspecto que no fue
valorado correctamente por la Jueza de garantías.

Asimismo, es importante aclarar que, si bien en los antecedentes no se encuentra la resolución que
rechaza la cesación a la detención preventiva, sin embargo, existe ausencia de relevancia
constitucional para examinar el fondo de la misma, al constatarse en todo caso el incumplimiento del
principio de subsidiaridad desarrollado por la jurisprudencia constitucional citada en los Fundamento
Jurídico III.3 y 4 de la presente Sentencia.

En consecuencia, la Jueza de garantías, al haber concedido la acción de libertad, no ha evaluado en


forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 417
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le confiere


la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución 01/2012 de 17 de
febrero 2012, cursante de fs. 24 a 26; y, en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONA PLURINACIONAL 0059/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00141-2012-01-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 007/2012 de 11 de febrero, cursante de fs. 79 vta. a 81, pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Jesús Mamani Ventura en representación sin
mandato de Luciano Alvez Ferreira contra Ponciano Ruiz Quispe y Germán Miranda
Guerrero, Vocales de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia
de Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 10 de febrero de 2012, cursante de fs. 12 a 13 vta. de obrados, el


representante sin mandato del accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Su cliente está siendo procesado penalmente por un hecho ocurrido el 25 de diciembre de 2008,
encontrándose con detención preventiva desde el 19 de junio de 2010, más de dieciocho meses,
presentando un sin fin de incidentes de cesación a la detención preventiva, entre estos últimos ante
el Tribunal Segundo de Sentencia que mereció la Resolución de 13 de septiembre de 2011, en la
cual se rechazó la cesación a la detención preventiva, por no estar actualizado el certificado
domiciliario.

El 3 de enero de 2012, nuevamente solicitó cesación a la detención preventiva, presentando nuevos


elementos para ser valorados como el certificado domiciliario actualizado y Auto de Vista de 10 de
diciembre de 2011, que anula la Sentencia de primera instancia, dictándose una Resolución que no
valoró este último elemento, por lo que oportunamente interpuso recurso de apelación contra este
fallo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 418


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En audiencia de 7 de febrero de 2012, las autoridades demandadas confirmaron la Resolución con


el argumento de que el domicilio no fue desvirtuado y que persiste el peligro de fuga, siendo que
no fueron objeto de apelación; además se pusieron a valorar nuevamente el certificado
domiciliario, que no fue motivo de la apelación y agravaron su situación al considerar que el
accionante se encuentra dentro de la previsión del art. “234 núm. 6” del Código de Procedimiento
Penal (CPP).

Por último, indica que el Auto de Vista recurrido de casación ya fue devuelto con el Auto Supremo
que declaró improcedente el recurso planteado por el querellante y por el Ministerio Público,
siendo favorable a su representado y que no fue considerado por las autoridades demandadas.

De lo expuesto, advierte que se le está coartando el derecho a la libertad de su representado,


violando el principio de ser considerado inocente y ser tratado como tal en todo momento, no se le
está dando la oportunidad de asumir defensa en libertad y obligándole a purgar una pena
anticipada, siendo ilegalmente procesado y perseguido.

I.1.2 Derechos supuestamente vulnerados

El representante sin mandato estima como vulnerados los derechos del accionante a la libertad y al
debido proceso, principio de inocencia, citando al efecto los arts. 22, 115.II y 117 de la
Constitución Política del Estado (CPE) y 6 del CPP.

I.1.3.Petitorio

Solicita se conceda la presente acción y se ordene a los accionados proceder a reparar los defectos
legales denunciados, dictar nueva resolución pronunciándose sólo sobre los puntos apelados y
establecer si los Jueces del Tribunal Segundo de Sentencia valoraron correctamente el Auto de
Vista de 10 de diciembre de 2011, restableciendo el debido proceso.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 11 de febrero de 2012, según consta en el acta de fs. 79 a 81 de


obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado y representante del accionante, en audiencia ratificó in extenso los términos expuestos
en su demanda de acción de libertad.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los Vocales demandados no asistieron a la audiencia, ni tampoco presentaron informe alguno.

I.2.3. Resolución

El Juez de Sentencia del Distrito Judicial de Pando, por Resolución 007/2012 de 11 de febrero,
cursante de fs. 79 vta. a 81, denegó la acción de libertad, con el fundamento que no se ingresó al
análisis de fondo puesto que la Resolución de 7 de febrero de 2012 no tiene vinculación directa con
la libertad y no opera como causa directa para la restricción o supresión de ésta.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 419


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. El Tribunal Segundo de Sentencia, en audiencia pública dictó el Auto de 13 de septiembre de


2011, por el cual rechazó la cesación de la detención preventiva presentada por el acusado
actualmente representado del accionante- Luciano Alvez Ferreira (fs. 9 a 10).

II.2. Mediante Sentencia 04/2011 de 22 de agosto el Tribunal Segundo de Sentencia “, condenó a


Luciano “Alves” Ferreira por el delito de asesinato, a cumplir la pena privativa de libertad de
treinta años sin derecho a indulto en el penal de “Villa Busch” de la ciudad de Cobija, contra dicha
Resolución el procesado interpuso apelación restringida y por Resolución de 10 de diciembre de
2011, la Sala Penal y Administrativa de la entonces Corte Superior del Distrito Judicial de Pando,
deliberando en el fondo declaró procedente y en consecuencia anuló totalmente la Sentencia
apelada, disponiendo la reposición del juicio por el “Tribunal de Sentencia Primero de la capital de
departamento” (fs. 19 a 22).

II.3. El accionante, por memorial de 3 de enero de 2012, solicitó al Tribunal Segundo de


Sentencia, la cesación de la detención preventiva, fundando la misma en nuevos elementos de
convicción como ser: a) Certificado domiciliario actualizado con domicilio verificado y,
debidamente identificado; b) Sentencia condenatoria que fue anulada en su totalidad,
desapareciendo este peligro procesal -referido al peligro de fuga señalado en el art. 234.6 del CPP-;
y, siendo que existe una duda sobre su participación ya no existen todos los elementos para que sea
procedente la detención preventiva (fs. 23 a 24).

II.4. En audiencia pública, celebrada el 16 de enero de 2012, el Tribunal Segundo de Sentencia


pronunció Resolución, por la cual rechazó la solicitud de cesación a la detención preventiva del
imputado Luciano “Alves” Ferreira con el siguiente fundamento: 1) La certificación domiciliaria
evidentemente establece que ha mejorado la situación jurídica del imputado, “estableciendo para este
Tribunal la veracidad del domicilio”; y, 2) Para el Tribunal queda claramente establecido que no se
encuentra ejecutoriado el respectivo Auto de Vista de 10 de diciembre de 2011, que lo estipulado por el
art. 234.6 del CPP en su última parte -haber recibido condena privativa de libertad en primera instancia-,
establece claramente la resolución asumida por el Tribunal, a tiempo de haber dictado la Sentencia
correspondiente, quedando vigente esta primera instancia, por no estar ejecutoriado el respectivo Auto
de Vista, “por otra parte ante las circunstancias evidenciadas por este Tribunal el peligro de fuga existe y
se mantiene aún vigente, en razón a que este peligro de fuga se daría justamente como consecuencia de
haber sido pronunciada una sentencia condenatoria por parte del Tribunal” (fs. 51 a 53).

II.5. El accionante, presentó apelación incidental contra la Resolución de “11 de enero de 2012”
(fs. 55 y vta.), la misma que es resuelta por las autoridades demandadas, mediante Resolución de
“7 de enero de 2012”, confirmando el Auto apelado de 16 de enero de 2012, pronunciado por el
Tribunal Segundo de Sentencia, por estar vigente el peligro procesal de fuga, conforme a la
siguiente fundamentación: i) El Tribunal a quo no ha valorado correctamente la certificación
domiciliaria, porque en dicho documento no indica con precisión la habitualidad del imputado ni a
qué título vive en ese domicilio rural (como propietario, anticresista, inquilino, precarista, simple
poseedor); además, de tratarse de un certificado contradictorio que acredita que tiene domicilio en
la comunidad Aduana y que a la fecha se encuentra privado de libertad; y, ii) Existe una Sentencia
condenatoria contra el accionante anulada por Auto de Vista, y se está a la espera de otro juicio
donde se dictará una nueva sentencia, por lo que el peligro procesal de fuga no ha desaparecido;
pues podría internarse en el monte o volver a su país de origen, existiendo inminente temor al no
garantizarse la presencia del imputado durante el nuevo juicio oral, estando latentes los peligros
procesales establecidos en el art. 234.1 y 6 del CPP (fs. 77 a 78 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 420


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.6. La Sala Penal Segunda del Tribunal Supremo de Justicia, por Auto Supremo 006 de 27 de
enero de 2012, declaró inadmisibles los recursos de casación formulados (fs. 3 a 5).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

El representante sin mandato estima como vulnerados los derechos de su representado a la libertad,
al debido proceso y al principio de inocencia, debido a que las autoridades demandadas no
consideraron los nuevos elementos para la cesación de la detención preventiva; además, de
pronunciarse sobre puntos no apelados. En consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales
extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad: finalidad y alcances

La acción de libertad es una de las acciones de defensa que contempla el nuevo orden
constitucional, instituida en su art. 125 de la CPE, que tiene por finalidad garantizar la protección
de los derechos a la vida y a la libertad, que podrá interponerse por toda persona que considere su
vida en peligro, que es ilegalmente perseguida o es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, y acudir a la justicia constitucional, de manera oral o escrita, por sí u otra persona a su
nombre sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, con la finalidad de solicitar y obtener la tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad.

La jurisprudencia desarrollada por el Tribunal Constitucional, estableció a través de la SC


0011/2010-R de 6 de abril, que: “La acción de libertad, es una acción jurisdiccional de defensa
que tiene por finalidad proteger y/o restablecer el derecho a la libertad física o humana, y también
el derecho a la vida, si es que se halla en peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad
personal, sea disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento de las
formalidades legales y/o la remisión del caso al juez competente, la restitución del derecho a la
libertad física, o la protección de la vida misma, motivo por el cual se constituye en una acción
tutelar preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza como su
nombre lo indica, la libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE”.

En ese entendido, la Constitución Política del Estado en cuanto a su ámbito de protección“…se


extiende al derecho a la vida, la libertad física o personal, el debido proceso, en lo que se refiere
al procesamiento indebido y la libertad de locomoción, esta última dada la íntima relación que
existe con el derecho a la libertad física, según la interpretación extensiva realizada por la SC
0023/2010-R de 13 de abril” (SC 1211/2011-R de 13 de septiembre).

La acción de libertad es una garantía constitucional, que se constituye en un instrumento de


defensa o de protección contra lesiones a los derechos a la vida, a la libertad personal y de
locomoción, a la integridad personal, y a un procesamiento indebido vinculado con la libertad;
además, de ejecutarse a través de un procedimiento constitucional sumarísimo, por lo que el
constituyente otorgó a cualquier persona este medio de defensa directo, sencillo, eficaz y oportuno,
para restituir los derechos a la libertad física o personal y de locomoción que hubieren sido
vulnerados.

III.2. Obligación del juez o tribunal de garantías con referencia a la presencia del accionante
en la audiencia pública de acción de libertad

Dentro de las acciones de defensa reconocidas constitucionalmente, se encuentra actualmente la


denominada acción de libertad que se constituye en una garantía de protección a los derechos a la
libertad personal y de locomoción, a la vida y a la integridad personal; además, ante un
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 421
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

procesamiento indebido vinculado con el derecho a la libertad y la existencia de persecución ilegal,


en este sentido la autoridad judicial constituida en juez o tribunal de garantías, conforme al art.
126.I de la CPE, a tiempo de señalar día y hora de audiencia pública debe disponer que: a) La
persona accionante sea conducida a su presencia, con dicha orden se practicará la citación personal
o por cédula a la autoridad o a la persona denunciada, orden que será obedecida sin observación
ni excusa, tanto por la autoridad o la persona denunciada como por los encargados de las cárceles
o lugares de detención, sin que éstos, una vez citados, puedan desobedecer; o, b) Acudirá al lugar
de la detención para asegurar la presencia y participación del accionante, ante el juez o tribunal de
garantías en resguardo del principio de inmediación y poder verificar la existencia de una amenaza
a la vida e integridad personal, evidenciar las condiciones de privación de libertad que pudiera
existir respecto del accionante -en casos de torturas y vejámenes-; además de poder alegar nuevos
hechos; es decir, por regla general la celebración de la audiencia necesariamente debe llevarse a
cabo con la presencia del accionante.

En este mismo sentido la Ley 027 de 6 de julio de 2010 -Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional-, con referencia al procedimiento en la tramitación de la acción de libertad, en su art.
68.5, indicó que: “ En caso de tratarse de una privación de libertad indebida, la jueza, juez o
tribunal dispondrá que la o el privado de libertad sea conducido a su presencia sin
observación ni excusa, tanto por la autoridad o persona denunciada, como por los encargados de
las cárceles o lugares de detención. En caso de peligro, resistencia de la autoridad u otra situación
que a criterio de la jueza, juez o tribunal, resulte importante, acudirá inmediatamente al lugar de la
detención e instalará la audiencia”. De una interpretación “desde la Constitución” de dicha
normativa se tienen los siguientes presupuestos: 1) El juez o tribunal de garantías, tendrá la
obligación de disponer que la o el privado de libertad sea conducido a su presencia; y, 2) El juez o
tribunal de garantías, acudirá inmediatamente al lugar de detención -sea éste público o privado- e
instalará la audiencia, ante la existencia de peligro, resistencia de la autoridad pública o persona
particular denunciadas u otra circunstancia que a criterio de la autoridad judicial resulte importante.

En el caso presente pese a estar debidamente notificado el Director de la cárcel Villa Busch
incumplió con su obligación de conducir al accionante a la audiencia pública de la presente acción
de defensa y tampoco justificó dicha ausencia, con lo que omitió dar cumplimiento no sólo a una
resolución judicial sino también a una norma constitucional y el Juez prescindió de la presencia del
accionante alegando de manera genérica e indeterminada la imposibilidad de trasladarse al penal
de Villa Busch al sostener que “no se tiene ningún tipo de comunicación con la cárcel, se continua
con la presente audiencia, en vista que esta presente el Dr. Jesús Mamani, quien presento la acción
de libertad en representación sin mandato de Luciano Alvez” inobservando en dicha actuación la
debida fundamentación, pese a ello en el presente caso independientemente a la responsabilidad
jurídica que podría originarse no corresponde anular obrados porque el representante manifestó en
la continuación de la audiencia de acción de libertad, se impugna una resolución objetiva
constatable por este tribunal, e incluso la autoridad jurisdiccional advertida de deficiencias en la
demanda de libertad, puede subsanar las mismas resolviendo de oficio a favor del accionante, en
razón a que en las acciones de libertad no rige el principio de congruencia y en todo caso existe la
posibilidad de interponer un nuevo planteamiento de acción de libertad si el accionante considera
que no pudo manifestar todos los actos que creyere atentatorios a su derecho.

III.3. Cesación de la detención preventiva ante la existencia de nuevos elementos de juicio


(art. 239.1 del CPP) y el marco de análisis del Tribunal de alzada que resuelve la apelación
incidental

El art. 239.1 del CPP determina que la detención preventiva cesará: “Cuando nuevos elementos de
juicio demuestren que no concurren los motivos que la fundaron o tornen conveniente que sea
sustituida por otra medida”.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 422
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Del entendimiento jurisprudencial desarrollado por esta misma Sala, perteneciente al Tribunal
Constitucional Plurinacional, en la SCP 0014/2012 de 16 de marzo, se estableció que: ”… el
tribunal de alzada que resuelve la apelación incidental de la solicitud de cesación de la detención
preventiva por el supuesto contemplado en el art. 239.1 del CPP, en su resolución debe realizar el
análisis ponderado de dos elementos: 1) ¿Cuáles fueron los elementos de convicción y supuestos
que determinaron la imposición de la detención preventiva? y, 2) ¿Los nuevos elementos de
convicción que aportó el imputado demuestran que ya no concurren los motivos que determinaron
la medida o la conveniencia de que la medida sea sustituida por otra?, análisis que debe
realizarse en el marco de lo establecido en el art. 398 del CPP, que dispone que `Los tribunales
de alzada circunscribirán sus resoluciones a los aspectos cuestionados de la resolución´(negrillas
agregadas), es decir, contrastando los dos primeros elementos, con estos otros dos: 1) ¿Cuáles
fueron los puntos expuestos como agravios por el apelante?; y 2) ¿Cuáles los fundamentos de la
resolución que resolvió la cesación de detención preventiva en primera instancia?”.

III.4. La valoración objetiva e integral de los elementos probatorios por parte del tribunal de
apelación en la cesación de detención preventiva (art. 239.1 del CPP)

Siguiendo con la jurisprudencia constitucional desarrollada en la SCP 0014/2012, se determina


que: “… al resolver la cesación de la detención preventiva, el Juez de Instrucción debe considerar
si con los nuevos elementos de juicio el imputado logra destruir o modificar sustancialmente los
motivos que fundaron la detención preventiva, y de no darse esa situación, el Juzgador rechazará
la solicitud, pero para ello es necesario que su determinación contenga una explicación motivada
de las razones por las cuales persisten los motivos que fundaron la detención preventiva,
condición que también se aplica al Tribunal de alzada que pudiese conocer en revisión la
determinación asumida por el Juez a quo, pues el Juez o Tribunal de apelación de igual forma
debe pronunciar una resolución lo suficientemente motivada, realizando una valoración
integral de los nuevos elementos presentados por el imputado, expresando si los mismos
destruyen o no los motivos que fundaron la detención preventiva'.

En ese mismo sentido está la SC 1147/2006-R de 16 de noviembre, al determinar: '…la resolución


que resuelva la solicitud de cesación de la detención preventiva debe reunir las condiciones de
validez, para ello la autoridad judicial competente a tiempo de contrastar los nuevos elementos
presentados por el imputado, deberá fundamentar la decisión de conceder o rechazar la solicitud
de cesación de la detención expresando los motivos de hecho y de derecho en que funda su
determinación, los cuales deben obedecer a criterios objetivos, exponiendo el valor otorgado a los
medios de prueba presentados y sujetando su análisis a los presupuestos que fundaron la
detención preventiva del imputado, la fundamentación que no puede ser reemplazada por la
simple relación de los documentos o la mención de los requerimientos de las partes, sino las
razones jurídicas que justifican la decisión adoptada'.

Por su parte, la SC 1147/2006-R, respecto a qué debe entenderse por valoración objetiva e
integral de los elementos probatorios en la cesación de detención preventiva, señaló: '…que debe
valorar todos los elementos y finalmente decidir en la forma que sea menos gravosa para el
imputado (…) cuando se trata de la valoración objetiva e integral de los elementos probatorios en
la cesación de detención preventiva al amparo del art. 239.1 del CPP, es deber del juez y también
del tribunal de alzada tomar en cuenta en forma integral los nuevos elementos de juicio aportados
por el imputado que demuestran que no concurren los motivos que fundaron se disponga su
detención preventiva o existen otros que tornen conveniente sustituirla por otra medida; y los
aportados como prueba por la parte acusadora o víctima que acreditan que tales motivos
subsisten (…) para que una resolución judicial de detención preventiva o de rechazo de cesación a
la detención sea fundada en derecho, debe pronunciarse cuidadosamente evaluando todas las
circunstancias concurrentes en el caso, es decir, toda la prueba disponible en el momento en que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 423
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ha de adoptarse la decisión que hubiere sido aportada por las partes, por lo que no podrá
fundarse una resolución judicial basándose únicamente en una circunstancia existiendo otras que
puedan confirmar la inexistencia de los peligros de fuga y obstaculización” (negrillas agregadas).

III.5. La no necesidad de invocar indefensión absoluta cuando se alega procesamiento


indebido frente a la impugnación de resoluciones cautelares

Por último, el Juez de garantías al haber aplicado la línea jurisprudencial en cuanto al


procesamiento indebido en las acciones de libertad con los dos supuestos de que el acto lesivo debe
estar vinculado con la libertad y que exista absoluto estado de indefensión, obró equivocadamente,
pues la misma no se aplica tratándose de medidas cautelares de carácter personal; además,
actualmente el Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de esta Sala Tercera generó una
aclaración a esta línea jurisprudencial únicamente con relación a la indefensión absoluta, indicando
que:”… el entendimiento asumido en la última parte del segundo supuesto contenido en el
Fundamento Jurídico III.4 de la SC 0080/2010-R, además de los requisitos exigidos por la propia
jurisprudencia para aquellos casos en los que denuncien lesiones al debido proceso, como son su
vinculación directa con el derecho a la libertad o derecho de locomoción y el agotamiento de los
medios de impugnación intraprocesal, incluye la 'indefensión absoluta y manifiesta', sosteniendo
lo siguiente:

'…puesto que el debido proceso es impugnable a través de la acción de libertad, sólo en los casos
de indefensión absoluta y manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o
restricción a la libertad física'.

Al respecto y en coherencia con lo manifestado precedentemente, tratándose de medidas


cautelares de carácter personal, no es posible exigir la concurrencia del absoluto estado de
indefensión como requisito para activar la acción de libertad, habida cuenta que, conforme lo
establecieron las propias Sentencias Constitucionales citadas, el actor debe agotar los
mecanismos de impugnación intraprocesales previo a la activación de la acción de libertad. Un
razonamiento contrario implicaría exigirle al accionante una situación jurídica materialmente
imposible, porque desde ya, el agotamiento de los medios de reclamación idóneos, obliga a su
participación activa en el proceso. Situación diferente es aquella en la que, al imputado se lo
colocó en un estado absoluto de indefensión, lo que le impidió activar los mecanismos
intraprocesales referidos, circunstancia última en la que la acción de libertad se activará de
manera directa.

Razonamiento que aclara la línea jurisprudencial, únicamente con relación a la última parte del
segundo supuesto, extractada y analizada de la SC 0080/2010-R, por los motivos antes señalados;
teniendo en cuenta además, que de manera implícita, el Tribunal Constitucional, en los casos
referidos a medidas cautelares de carácter personal que fueron sometidos a su conocimiento,
aplicó el razonamiento que expresamente se desarrolló en la presente Sentencia” (SCP 0037/2012
de 26 de marzo).

III.6. Análisis del caso concreto

El representante sin mandato, a través de la presente acción de libertad, denunció que se vulneró
los derechos de su representado a la libertad y al debido proceso, principio de inocencia, ante el
rechazo a la solicitud de cesación de detención preventiva presentada por el accionante, por cuanto
en apelación las autoridades demandadas -Vocales de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando- confirmaron el Auto apelado pronunciado por el Tribunal
Segundo de Sentencia, por estar aún en vigencia el peligro de fuga, con el fundamento de que: i) El
Tribunal a quo no valoró correctamente la certificación domiciliaria; y, ii) El peligro de fuga
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 424
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

persiste por cuanto el detenido sabiendo que anteriormente se dictó una Sentencia condenatoria,
con mayor razón huiría de su domicilio, para internarse en el bosque o volver a su país de origen.
Estando a criterio de los Vocales demandados, latentes los peligros procesales señalados en el art.
234.1 y 6 del CPP, conforme a los datos del expediente venido en revisión y que consta
extensivamente en las Conclusiones de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional.

De la jurisprudencia precedentemente expuesta y desarrollada en la justicia constitucional, se


establece que las autoridades demandadas, constituidos en Tribunal de alzada, a tiempo de resolver
la solicitud de cesación de detención preventiva y rechazar la misma, sujetaron su decisión a la
Resolución apelada y a los puntos expuestos por el apelante, por lo que realizaron una adecuada
compulsa y valoración de la prueba presentada; es decir, de los nuevos elementos de convicción,
circunscribiendo su decisión a los aspectos cuestionados del fallo de primera instancia.

De un análisis del contenido argumentativo de la Resolución de “7 de enero de 2012”, que se


constituye en el sustento de su parte resolutiva y dispositiva, en la que los Vocales demandados
resolvieron confirmar el Auto apelado de 16 de enero de 2012, de rechazo de la solicitud de
detención preventiva del accionante, se concluye que el Tribunal de alzada realizó una valoración
integral y objetiva de todos los elementos de convicción referidos al nuevo certificado domiciliario
y Auto de Vista que anuló la Sentencia condenatoria para sostener de esta forma su rechazo.
Asimismo, debe dejarse claramente establecido que el análisis del Tribunal ad quem, es uno nuevo,
de todos los supuestos y riesgos procesales, por lo que no se actuó ultra petita.

En consecuencia, los vocales demandados evaluaron todas las circunstancias concurrentes en el


caso; es decir, los nuevos elementos de convicción presentados por el accionante referidos al nuevo
certificado domiciliario y Auto de Vista que anuló la Sentencia condenatoria dispuesta contra éste,
motivando y fundamentando su Resolución de la siguiente forma: a) El Tribunal a quo no valoró
correctamente la certificación domiciliaria, puesto que en ese documento no se precisaba la
habitualidad del imputado, ni se indicaba a qué titulo vivía en ese domicilio rural (como
propietario, anticresista, inquilino, precarista, simple poseedor), considerando que se trata de un
certificado contradictorio, ya que acredita que tiene domicilio en la comunidad Aduana y que a la
fecha se encuentra privado de libertad; b) Por Auto de Vista se anuló la Sentencia condenatoria
contra el accionante, estando a la espera de nuevo juicio, consideran que el peligro procesal no ha
desaparecido, estando más latente que antes, puesto que el detenido sabiendo que anteriormente se
dictó Sentencia condenatoria, con mayor razón huiría de su domicilio, internarse al monte o volver
a su país de origen, por lo que haciendo un análisis integral y objetivo, el Tribunal de alzada
considera que el peligro de fuga persiste y que el imputado se daría a la fuga por tener una
Sentencia condenatoria, aunque la misma haya sido anulada, existiendo un inminente peligro y
temor porque en el futuro no se garantizará la presencia del imputado durante el nuevo juicio oral
por estar latentes los peligros procesales establecidos en el art. 234.1 y 6 del CPP, ya que la
fundamentación del fallo emitido por parte de las autoridades demandadas fue concisa, clara y
respondió a todos los puntos demandados, habiendo expresado de forma precisa la convicción a la
cual llegó el Tribunal para así justificar de una forma no irracional su decisión.
El Tribunal ad quem no se limitó únicamente a indicar que el Juez a quo realizó una valoración
inapropiada de los nuevos elementos de convicción -elementos de prueba- presentados por el
imputado, con relación a lo dispuesto en el art. 234.1 y 6 del CPP, sino que al contrario realizó una
valoración integral y objetiva de todos éstos.

En consecuencia el Juez de garantías, al denegar la acción tutelar, aunque con otro fundamento ha
actuado correctamente.

POR TANTO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 425


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7
de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve:

1º DENEGAR la tutela solicitada.

2º Disponer que con referencia al Director del recinto penitenciario Villa Busch se remitan
antecedentes ante la Dirección General de Régimen Penitenciario del Ministerio de Gobierno para
que considere si los motivos o razones por las cuales esta autoridad no condujo al accionante ante
la presencia del Juez de garantías son o no justificados.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0061/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00165-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución 02/2012 de 11 de febrero, pronunciada, dentro de la acción de libertad


interpuesta por Blanca Fernández de La Fuente, Sonia Rojas Guerra y Flora Calizaya
Uturuncu en representación legal de José Alfredo La Fuente Fernández, Jhonatan Guerra
Rosas y Jhonatan García Calizaya contra Patricia Torrico Ortega, Jueza Tercera de
Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, y Patricia
Zenteno Heredia, Fiscal de Materia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 10 de febrero de 2012, cursante de fs. 44 a 46, las accionantes
manifiestan lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En fecha 10 de octubre del 2011 fueron aprehendidos sus hijos y otros adolescentes, por el
supuesto delito de robo, siendo trasladados a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen
(FELCC) de la ciudad de Cochabamba, donde estuvieron por dos días, para posteriormente ser
llevados a la Fiscalía y por último imponerles la detención preventiva en el Penal de “San Antonio”
de esa misma ciudad, estando recluidos en ese centro penitenciario por más de tres meses, sin
haberse realizado la correspondiente audiencia de medidas cautelares, porque la misma no consta
en el expediente.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 426


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Refieren que, en la imputación formal, la Fiscal asignada, solicita la detención preventiva haciendo
alusión al delito de violación siendo en realidad por el delito de robo, faltando de esta manera al
principio de uniformidad y congruencia en la imputación; acusan asimismo, falta de notificación a
sus personas, en su condición de tutores de los adolescentes y por lo mismo un estado de
indefensión y vulneración a sus derechos.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La parte accionante, alega de manera confusa la vulneración del derecho a la libertad de sus
representados, mencionando los arts. 3, 9 y 13 de la Declaración Universal de los Derechos
Humanos (DUDH); 22, 23.II y IV, 60 y 115.II de la Constitución Política del Estado (CPE);
párrafo segundo del 221 y párrafo segundo del 226 del Código de Procedimiento Penal (CPP); 4 y
5 del Código Civil (CC); y, 225 y 233 del Código Niño, Niña y Adolescente (CNNA); citando por
último las SSCC 0685/2004-R; 0059/2006-R y 1874/2004-R.

I.1.3. Petitorio

Solicitan se declare “procedente” la acción interpuesta y se disponga la libertad de José Alfredo La


Fuente Fernández, Jhonatan Guerra Rosas y Jhonatan García Calizaya.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 11 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante a fs.
75 y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, ratificó la integridad del memorial de acción de libertad, sin
argumentar hechos o fundamentos jurídicos nuevos.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Patricia Torrico Ortega, ex Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal, refiere que, no obstante a
partir del 13 de enero de 2012 desempeña otras funciones, presenta su informe al Tribunal de
garantías, puesto que dicha autoridad fue quien resolvió la situación jurídica de los imputados,
señalando: a) El 11 de octubre -entiéndase de la gestión 2011-, se informó sobre la comisión de un
ilícito investigado por el Ministerio Público, en contra de Jhonatan Guerra y Jhonatan García,
quienes fueron imputados por el delito de robo agravado; b) Se programó audiencia de medidas
cautelares para el día 12 de octubre del mismo mes y año, habiéndose notificado a las partes
mediante la resolución correspondiente; c) En ningún momento se ha restringido derecho alguno
de los imputados, siendo que para disponer la detención preventiva se verificó la existencia de los
presupuestos establecidos por el art. 233 del CPP, correspondiendo más bien a los representantes
de los imputados, apelar de esta Resolución; y, d) Existía un acuerdo de procedimiento abreviado
respecto a José Alfredo La Fuente, el mismo no ha sido sometido a control jurisdiccional ni a
competencia del Tribunal, por lo que solicitó se deniegue el recurso interpuesto.

Consta en el acta, la no presencia de la autoridad codemandada, Patricia Zenteno Heredia, Fiscal de


Materia asignada a la División Menores y Familia, quien luego por memorial de 13 de febrero de
2012, cursante a fs. 81 y vta., argumenta que no fue notificada en forma personal, ni tampoco su
asistente para la celebración de la mencionada audiencia, verificándose en el expediente la
inexistencia de notificación alguna a esta autoridad, existiendo simplemente un sello de la Fiscalía

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 427


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del Distrito de Cochabamba; asimismo, informó que se encontraba de turno el 10 de febrero del
mismo año, en horas de la noche.

I.2.3. Resolución

Mediante Resolución 02/2012 de 11 de febrero, cursante de fs. 76 a 77 vta., la Sala Penal Segunda
del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, denegó la tutela solicitada, argumentando
que: 1) Del legajo procesal presentado por la Jueza demandada, se evidencia un informe de
Intervención Policial Preventiva de 10 de octubre de 2011 a horas 17:44 del Sub Teniente Marcelo
Gutiérrez Bustamante, que informa sobre la flagrancia en que fueron aprehendidos Jhonatan García
Calizaya, Jhonatan Guerra Rosas y José “Luís” La Fuente Fernández, por la supuesta comisión de
robo agravado; 2) El 11 de octubre de 2011, a horas. 15:45, la Fiscal Patricia Zenteno Heredia,
presentó ante la Jueza demandada, el informe de inicio de investigaciones, remitió a los
aprehendidos y los imputó formalmente, por la presunta comisión del delito de robo agravado,
solicitando la aplicación de la medida cautelar de detención preventiva; 3) En la misma fecha, la
Jueza Patricia Torrico Ortega, en conocimiento de la causa fijó audiencia de consideración de
medidas cautelares para el 12 de octubre del referido año, a horas 14:00, donde se determinó la
detención preventiva de Jhonatan García Calizaya, Jhonatan Guerra Rosas y “José Luís Lafuentes
Fernández", aprehendidos en el Recinto Penitenciario de San Antonio de la ciudad de
Cochabamba.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Por informe de acción directa de 10 de octubre de 2011 de fs. 6 a 7, repetido a fs. 68 y vta.,
emitido por el funcionario policial Sub Teniente. Marcelo Gutiérrez Bustamante de la FELCC de
Cochabamba, se tiene que, en la mencionada fecha, cinco varones y dos mujeres de 16 a 18 años
de edad promedio, entre ellos José “Luís” La Fuente Fernández, Jhonatan Guerra Rosas y Jhonatan
García Calizaya, fueron aprehendidos en flagrancia atracando, lesionando físicamente e
intimidando con un arma de fuego a una joven de 18 años de edad; realizada la aprehensión, los
mismos fueron conducidos a dependencias de la FELCC de dicha ciudad.

II.2. Mediante memorial de 11 de octubre de 2011, cursante de fs. 50 a 51 vta., a horas 15:25, la
Fiscal de Materia imputa formalmente y remite a los aprehendidos ante el Juez Instructor de Turno
en lo Penal de Cochabamba a José “Luís” La Fuente Fernández, Jhonatan Guerra Rosas, Jhonatan
García Calizaya y otros, por la supuesta comisión del ilícito de robo agravado, previsto en el art.
332 incs. 1) y 2) del Código Penal (CP), solicitando la representante del Ministerio Público la
detención preventiva de los imputados por las razones expuestas en dicha imputación.

II.3. Por Resolución de 11 de octubre de 2011, cursante a fs. 52, la Jueza Tercera de Instrucción en
lo Penal, conoce la causa, asumiendo jurisdicción y competencia; y señala audiencia de aplicación
de medidas cautelares el 12 de octubre de 2011 a horas. 14:00, en la que luego se dispuso la
detención preventiva de “José Luís Lafuentes Fernández”, Jhonatan Guerra Rosas, Jhonatan García
Calizaya y otro, en el Centro Penitenciario “San Antonio” de esa ciudad (fs. 60 a 62 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La parte accionante, denuncia la vulneración del derecho a la libertad de sus representados, al estar
supuestamente detenidos preventivamente sin haberse realizado la audiencia de medidas
cautelares, asimismo se denuncia que la Fiscal solicitó la detención preventiva en función al delito
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 428
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de violación y no de robo, por último denuncian la falta de notificación a sus personas en su


condición de “tutores” de los imputados, creando en ellos un estado de indefensión.

En consecuencia, corresponde analizar en revisión, si en el presente caso, se debe ingresar o no al


fondo de la problemática planteada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

El Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de la SCP 0037/2012 de 26 de marzo, ha


definido a la acción de libertad en los siguientes términos: “Se trata de un mecanismo de defensa
constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la
protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la libertad física como de
locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o
indebidos por parte de servidores públicos o de personas particulares; así como a la vida, cuando
esté en peligro”.

Está consagrada por el art. 125 de la CPE, cuando dispone que: “Toda persona que considere que
su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada
de libertad personal, podrá interponer acción de libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o
por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

Norma constitucional que guarda relación con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), el cual establece que el objeto de esta acción extraordinaria es la garantía,
protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el
restablecimiento inmediato y efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos,
suprimidos o amenazados de restricción o supresión.

Por regla general, la tutela de los derechos como la vida, la libertad física y la libertad de
locomoción -que son resorte exclusivo de la Acción de libertad-, no se encuentra regida por el
principio de subsidiariedad; al contrario, se activa sin el previo agotamiento de las vías legales
ordinarias, y son sus características la inmediatez en la protección, sumariedad, informalismo,
generalidad e inmediación; procede contra cualquier servidor público o persona particular y
tampoco reconoce fueros ni privilegios, correspondiendo conocer y resolver dicha acción
constitucional, al juez en materia penal, debido al principio de especialidad reconocido en la Ley
Fundamental.

Sin embargo, de manera excepcional opera el principio de subsidiariedad ante la existencia de


medios de impugnación específicos e idóneos para restituir de manera inmediata los derechos
objeto de su protección, o bien cuando se activa de manera paralela un medio de defensa previsto
en el ordenamiento jurídico, es decir, tanto en la vía constitucional como en la ordinaria.

En este sentido la SC 1182/2011-R de 6 de septiembre, ha precisado respecto de la subsidiariedad


de la acción de libertad que: “El recurso de hábeas corpus, ahora acción de libertad, es el medio
idóneo y eficaz para conocer y restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al
derecho a la vida, la libertad o constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o
ponga en peligro el derecho a la libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a
pesar de existir mecanismos de protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente,
éstos resulten ser evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de
defensa, por la urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir los
derechos afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de defensa que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 429
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o


procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos
por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos
afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas” (las negrillas son añadidas).

III.2. Análisis del caso concreto

Respecto a la denuncia de la parte accionante, en sentido de que sus representados fueron


aprehendidos junto a otras personas, por la supuesta comisión del delito de robo agravado,
tipificado en el art. 332 incs. 1) y 2) del CP, estando desde entonces detenidos por más de tres
meses sin haberse llevado a cabo la audiencia de medidas cautelares, por no constar ningún acta al
respecto en el expediente; se tiene que del análisis de obrados, se puede evidenciar que el 12 de
octubre de 2011, se celebró audiencia de medidas cautelares en el presente caso (fs. 60 a 62 vta.);
para este efecto fueron debidamente notificados con el señalamiento de dicha audiencia, en el
siguiente orden: la Fiscal de Materia asignada a la División Menores y Familia, José Alfredo La
Fuente Fernández, Jhonatan Guerra Rosas y Jhonatan García Calizaya en su condición de
imputados -constando además el sello y firma de la defensora pública- y la abogada de la
Defensoría de la Niñez y Adolescencia (fs. 54 y vta.). Concluyéndose que, lo aseverado por Blanca
Fernández de La Fuente, Sonia Rojas Guerra y Flora Calizaya Uturuncu, que no se habría
celebrado la audiencia de medidas cautelares es incongruente con los actuados existentes.

Con relación a la denuncia de que, en la imputación formal la Fiscal de Materia imputó a los
procesados por el delito de “violación”, tratándose del delito de robo anteriormente descrito,
además de no constituirse en la causa directa de la privación de libertad, se tiene que iniciado el
proceso penal con la intervención de la Policía, habiéndose hecho cargo del control jurisdiccional
la Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal -encargada de velar por el cumplimiento del debido
proceso y el ejercicio de los derechos fundamentales y garantías constitucionales-, si consideraban
los imputados o sus representantes a nombre de ellos, lesionados sus derechos o que, no se
observaron las formas y condiciones previstas en la Constitución Política del Estado,
Convenciones y Tratados Internacionales, ha sido a ella a quien debieron recurrir, pidiendo su
reparación y/o protección, y no directamente a través de la acción de libertad, conforme establece
el art. 54 del CPP.

Asimismo, respecto a la denuncia en razón, de que como padres no fueron notificados para
procurar defensa a favor de sus hijos, dicho extremo también debió previamente reclamarse
mediante los mecanismos intra-procesales previstos por el legislador ordinario, más
específicamente a través del incidente de actividad procesal defectuosa, establecido por el art. 167
y ss. del CPP. Al respecto, se ha pronunciado el Tribunal Constitucional a través de la SC
1141/2011-R de 19 de agosto, señalando: “En este sentido, el imputado tenía expedito para
proceder con cualquier reclamo que considera contrario a sus intereses, un mecanismo previsto
específicamente por el sistema procesal penal, como es el incidente de actividad procesal
defectuosa -así- según Clemente Espinoza Carballo, los incidentes 'constituyen medios de defensa
que permiten a las partes pedir saneamiento del proceso por la existencia de defectos relativos y
absolutos, para evitar que se vulneren los derechos y garantías del imputado'…”, aspecto que
impide ingresar a considerar el fondo de la problemática.

Concordante con lo anotado, el Tribunal Constitucional a través de la SC 1107/2011-R de 16 de


agosto, se ha pronunciado respecto de la idoneidad del incidente de actividad procesal defectuosa,
como medio para restablecer los derechos fundamentales considerados por las partes lesionadas:
“En aplicación del principio de impugnación en los procesos judiciales, garantizado por el art.
180.II de la Constitución Política del Estado (CPE), es preciso señalar que el art. 169 del CPP, ha
previsto los defectos absolutos que no son susceptibles de convalidación, mismos que pueden ser
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 430
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

impugnados a través del incidente de nulidad por actividad procesal defectuosa, impugnación que
cuenta como vía recursiva con el recurso de apelación incidental o en su caso el recurso de
apelación restringida. En ese sentido, la SC 0636/2010-R de 19 de julio, indicó: 'El derecho a
recurrir se halla establecido en el art. 394 del CPP, adicionando las dos limitaciones que lo
caracteriza, una objetiva y otra subjetiva. Por la primera, no todas las resoluciones son
recurribles, sino aquellas' en los casos expresamente establecidos (…). Por la segunda el ´El
derecho a recurrir corresponderá a quien le sea expresamente permitido por Ley, incluida la
víctima aunque no se hubiera constituido en querellante'. No obstante lo anotado, en relación a la
primera cabe precisar que el art. 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, más
conocida como 'Pacto de San José de Costa Rica´, lo incluye como un derecho fundamental, que
ahora es recogido por la Constitución Política del Estado vigente en su art. 180.II que señala: ´Se
garantiza el principio de impugnación en los procesos judiciales´, de donde se deduce que la
limitación objetiva a su vez no es absoluta”.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al haber denegado la acción de libertad, ha evaluado en


forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º DENEGAR la tutela solicitada.

2º Se llama la atención al Tribunal de garantías, porque desde la emisión del fallo que resuelve la
acción de libertad, hasta la remisión del mismo en revisión a éste Tribunal transcurrieron 13 días,
incumpliéndose el plazo establecido por el art. 126.IV de la CPE, advirtiéndose que de reiterarse
esta situación se dispondrá la remisión de antecedentes al Consejo de la Magistratura o al
Ministerio Público, para los efectos consiguientes.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez .-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños .-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0063/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00043-2012-01-AAC
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 2 de 25 de enero de 2012, cursante de fs. 60 a 61, pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional, interpuesta por René Alba en representación de
Getrudes Tomicha Taceo contra Jesús Hurtado Daza, Juez Primero de Partido, Sentencia y
Liquidador de Montero del Distrito Judicial de Santa Cruz.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 431
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 17 de enero de 2012, cursante de fs. 39 a 42 vta., el accionante,


alega que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 13 de octubre del año 2011 su representada, fue notificada con un mandamiento de


desapoderamiento dentro de un proceso de reivindicación de inmueble seguido por Asunta El
Hage Mendoza contra su concubino y padre de sus hijas Roque El Hage Mendoza, por el cual la
demandante pretende reivindicar el inmueble donde su representada vive por más de 50 años, en
posesión quieta y pacífica sin ser interrumpida por nadie que se creyera dueño o dueña; refiere
que, incluso con recursos propios y material de primera construyó su vivienda donde crió a
todos sus hijos; que con la mencionada demanda jamás fue citada como codemandada ni como
ocupante del inmueble a efectos de asumir su defensa legal en igualdad de condiciones.

Agrega que, la demanda y sentencia de un proceso incumbe sólo a los sujetos procesales que
actúan en ella, no alcanzando a terceras personas que no actuaron en la sustanciación de la
causa, la demandante al ser hermana de Roque El Hage Mendoza sabía y tenía pleno
conocimiento de la vida en común que llevaba con su representada, lo que implicaba que la
demanda debió ser dirigida contra ambas personas porque tienen y gozan de los mismos
derechos sobre el inmueble y al no haberlo hecho dejó a Getrudes Tomicha Taceo en completo
estado de indefensión provocando la ilegalidad del proceso; porque en los hechos el Juez
Primero de Partido y Sentencia de Montero libró mandamiento de desapoderamiento el 30 de
septiembre de 2011, pretendiendo sacarla de su vivienda sin darle la oportunidad de defenderse
dentro de un juicio justo. Por otra parte aclara que el mandamiento de desapoderamiento fue
librado para su ejecución contra Roque El Hage Mendoza, quien hubiera fallecido el año 2005,
hace “6 años” y ahora que su representada se encuentra sola pretenden desapoderarle sin ella
saber porque, o será que no la demandaron puesto que no sabe leer ni escribir, lo que constituye
sin duda discriminación.

Finalmente afirma que, su acción se encuentra dentro del plazo de seis meses establecidos por la
Constitución Política del Estado y la jurisprudencia constitucional porque la Resolución
pronunciada por el Juez Primero de Partido y Sentencia de Montero con la que fue notificada su
mandante es de 30 de septiembre de 2011 y ante la inexistencia de recursos o medios de defensa
contra el tipo de Resoluciones que impugna, que le permitan paralizar de forma inmediata la
Sentencia del proceso civil y consecuente mandamiento de desapoderamiento; opone acción de
amparo constitucional contra los actos ilegales y atentatorios pronunciados con la pretensión de
desapoderar a su mandante del inmueble donde vive por más de 50 años, consistentes en: El
viciado e ilegal juicio de reivindicación y otros seguido por Asunta El Hage Mendoza contra
Roque El Hage Mendoza, con la que su mandante no fue demandada ni citada con resolución
alguna, excepto con el mandamiento de desapoderamiento de 30 de septiembre 2011,
actualizado el 27 de diciembre del mismo año, la Resolución de 4 de noviembre del citado año y
el decreto de 17 de enero de 2012.

I.1.2. Derechos y principio supuestamente vulnerados

Considera vulnerados los derechos de su representada a la seguridad jurídica, a la defensa, a la


igualdad procesal, al debido proceso, a la tutela judicial efectiva y al principio de legalidad;
citando al efecto, los arts. 122 y 117.I de la Constitución Política del Estado (CPE).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 432
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela; disponiéndose en consecuencia: a) La nulidad del proceso ordinario


de reivindicación y otros seguido por Asunta El Hage Mendoza contra Roque El Hage Mendoza;
b) La nulidad del mandamiento de desapoderamiento ordenando se cite a Getrudes Tomicha
Taceo con la demanda; y, c) Se deje sin efecto alguno el mandamiento impugnado, porque el
demandado contra quien se debe ejecutar la Sentencia, Roque El Hage Mendoza, falleció el año
2005.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública, el 25 de enero de 2012 según consta en el acta cursante de fs. 55
a 59, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante por su mandante, ratificó el memorial de su demanda en su integridad y


ampliándola en forma alternativa manifestó que en audiencia presenta en calidad de prueba:
certificado de defunción de Roque El Hage, que acredita su fallecimiento el 13 de noviembre de
2005, certificados de nacimiento de sus tres hijas, que una de ellas nació en 1960, las otras dos
en 1966 y 1976, cuyos padres son Roque el Hage Mendoza y Getrudes Tomicha Taceo;
documentos que prueban que Roque el Hage Mendoza y su representada tenían vida en común
desde 1960, que a partir de esa fecha fueron poseedores detentadores del predio y de la vivienda
donde actualmente vive su mandante y que pretenden desapoderarla.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Jesús Hurtado Daza, Juez Primero de Partido, Sentencia y Liquidador de Montero, en su informe
a fs. 54 y vta., refirió: 1) El proceso de reivindicación seguido por Asunta El Hage Mendoza
contra Roque El Hage Mendoza iniciado en Puerto Suárez provincia Germán Busch se viene
tramitado en su despacho emergente de la excusa del Juez de la causa; encontrándose en etapa
de ejecución de sentencia y por ello se libró mandamiento de desapoderamiento; 2) Decir que
una persona vive más de cincuenta años en un inmueble, supuestamente de su propiedad,
significa que cuenta con algún documento que avale dicha aseveración; lo contrario es obstruir
la acción de la justicia, evitando la ejecución de fallos ejecutoriados y con sello de cosa juzgada,
que desde el año 2006 no puede hacerse efectiva la entrega a su propietaria del inmueble objeto
de la litis; 3) Del expediente se evidencia que el 8 de mayo de 2006, la ex titular de ese Juzgado,
Consuelo Caballero, libró mandamiento de desapoderamiento, sin que hasta el presente se pueda
hacer efectivo; 4) Para aplicar el principio de subsidiariedad en una acción tutelar de manera
provisional como es el amparo constitucional, se requiere la posibilidad de ocasionar un daño
grave, sin el cual no es aplicable, así lo estableció el Tribunal Constitucional en su SC
1291/2010-R; es decir, que se requiere de una ponderación del derecho invocado como
lesionado y las circunstancias que rodean el caso excepcional, la existencia del daño a
ocasionarse con un acto u omisión indebida debe ser grave e irreparable, situación que no se
presenta en la invocación planteada; 5) El mandamiento de desapoderamiento ha sido librado
para que el inmueble sea entregado a su propietaria, sin hacer referencia a persona alguna menos
a la ahora accionante conforme lo dispuesto en la Sentencia de 7 de noviembre de 1997 y Auto
de Vista que la confirma; y, 6) La presente acción de amparo constitucional debe ser denegada
porque no se vulneró ningún derecho de la accionante, además que para anular un proceso tiene
expedita la vía ordinaria y no la jurisdicción constitucional que es exclusiva para brindar tutela
cuando los derechos y garantías constitucionales han sido vulnerados o amenazados.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 433


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Intervención del tercer interesado

Asunta El Hage Mendoza en audiencia mediante su abogado patrocinante señaló: i) Se adhiere


al informe evacuado por el Juez Primero de Partido; haciendo conocer que es un proceso que
lleva más de 15 años donde su patrocinada demostró que adquirió el bien inmueble de manera
lícita, el cual a la fecha se encuentra inscrito en las oficinas de Derechos Reales (DDRR)
demostrando así su derecho propietario; ii) Aclara que su defendida siempre tuvo una buena
relación con Roque El Hage, ahora fallecido, lo cual era de pleno conocimiento de sus hijos, que
la razón por la que permitió que éste viva en el inmueble hasta el último día que existió fue
porque ella tuvo que migrar a Santa Cruz, pero que cuando retornaba a Puerto Suárez llegaba a
su inmueble. Señala, que, en el transcurso del tiempo se descubrió que Roque El Hage obtuvo
deudas con Asunta El Hage y Miriam El Hage, lo que originó se inicie el proceso ordinario en la
ciudad de Puerto Suárez y que por motivo de excusa viene a parar a este Juzgado y es así que
hasta la fecha como se nota del expediente lo que se ha hecho es seguir correlativamente el
procedimiento, por lo que en ningún momento se ha violentado derecho alguno, es mas el Juez
de Partido y de Sentencia de Portachuelo en suplencia legal, ordenó mediante Auto 463 de 4
noviembre de 2011, que también es motivo de la acción de amparo constitucional, que citemos a
los herederos conforme establece el art. 55 del CPC, lo que se cumplió notificando a las
personas que se creyeran ser herederos de Roque El Hage Mendoza, para que se apersonen
conforme a procedimiento en el estado en que se encuentre el proceso, consta en el cuadernillo
las tres publicaciones realizadas en el mes de noviembre; y, iii) Entonces en ningún momento se
han vulnerado derechos de una persona, es mas lo que se está tratando es seguir dilatando el
proceso.

I.2.4. Resolución

Mediante Resolución 2 de 25 de enero de 2012, cursante de fs. 60 a 61, el Juez Segundo de


Partido y de Sentencia de Montero del Distrito Judicial de Santa Cruz constituido en Juez de
garantías, denegó la tutela solicitada con los siguientes fundamentos: a) El art. 194 del Código
de Procedimiento Civil (CPC), establece el alcance de la sentencia determinando que: “Las
disposiciones de la sentencia solo comprenderán a las partes que intervienen en el proceso y a
las que trajeren o derivaren sus derechos de aquellas”. Entendiendo que en el caso,
supuestamente habría un litisconsorcio pasivo dentro del proceso ordinario planteado por la
Asunta El Hage contra Roque El Hage Mendoza de reivindicación y entrega de inmueble más
pago de daños y perjuicios; sin embargo a contrario de lo manifestado por el abogado y
apoderado de la parte accionante en sentido de que no se puede ser tolerado durante 50 años; de
los hechos y circunstancias aquí demostradas se evidencia que si a la representada del
accionante se la toleró por ese largo espacio de tiempo, ya que al no presentar ningún título de
dominio, como tampoco una sentencia constitutiva del supuesto matrimonio de hecho, se
concluye que la “recurrente” es tolerada como establece el art. 90 del Código Civil (CC), que
sobre los actos de tolerancia previene: “Los actos de tolerancia no pueden servir de fundamento
para adquirir la posesión “; b) La representada del accionante presenta certificado de defunción
y de algunos hijos del fallecido que no tienen nada que ver con esta causa, porque según el
expediente se cita a Roque El Hage Mendoza; c) Los certificados de nacimiento de los hijos del
demandado y de Getrudes Tomicha Taceo por si solos no acreditan la calidad de convivientes,
ya que se puede procrear sin serlo, situación que debe ser reconocida y constituida por una
sentencia por autoridad jurisdiccional; y, d) En este caso, de la tutela solicitada se verifica que
no existe legitimación activa porque no existe una sentencia que declare o constituya
matrimonio de hecho, solamente se verifica la calidad de tolerada de la “recurrente” en el
inmueble, toda vez que supuestamente era concubina de Roque El Hage Mendoza; además se
deja en claro que el Juez de garantías no resuelve derechos controversiales, solamente verifica la
conculcación y/o violación de derechos de las partes, en este caso no se verifica ninguna
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 434
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conculcación de derechos más bien verifica la dejadez y negligencia de la parte accionante,


como mencionan son 50 años y posteriores al fallecimiento de Roque El Hage 6 años que tuvo
para legalizar el supuesto derecho que le asiste.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el proceso, se establece lo


siguiente:

II.1. Por memorial cursante de fs. 2 a 3 vta., se establece que el 17 de octubre de 1995, Asunta
El Hage Mendoza inicia demanda sobre acción negatoria y consiguiente reivindicación,
desocupación, entrega de inmueble, además del pago de daños y perjuicios contra Roque El
Hage Mendoza.

II.2. Cursa de fs. 4 a 6, Sentencia pronunciada dentro del citado proceso, cuya parte resolutiva
declara probada la demanda interpuesta por Asunta El Hage Mendoza y probada en parte la
demanda reconvencional interpuesta por el demandado; disponiéndose en su mérito que Roque
El Hage Mendoza desocupe y entregue el inmueble objeto de la litis a la demandante Asunta El
Hage, previo pago de las mejoras introducidas a establecerse y calificarse en ejecución de
sentencia, desocupación que deberá producirse a tercero día de hacerse efectivo el pago de las
mejoras calificadas. Sentencia que es confirmada en todas sus partes por Auto de Vista de 11 de
mayo de 1998 cursante de fs. 7 a 8.

II.3. De fs. 9 a 11 de obrados cursa, Auto de calificación de daños y perjuicios ocasionados


dentro el referido proceso ordinario, pronunciado en etapa de ejecución de sentencia, el 5 de
septiembre de 2003; cuya parte resolutiva fija como daños y perjuicios ocasionados en la suma
de $us9 500.-(nueve mil quinientos dólares estadounidenses) a cancelarse por el demandado,
debido a la destrucción de dos ambientes del inmueble y por la privación de la posesión de la
que fue objeto la demandante; por otra parte por las mejoras introducidas por el demandado se
califica la suma de $us9515, 75.-(nueve mil quinientos quince 75/00 dólares estadounidenses) a
ser pagados por la demandante y al existir una correlación entre el pago que deben efectuarse
mutuamente las partes, se determina un saldo a favor del demandado de $us15,75.-(quince 75/00
dólares estadounidenses) a ser cancelados por la demandada a tercero día de ejecutoriada la
Resolución y a su vez se dispone la citación del demandado Roque El Hage para que en el
término de tercero día de cancelado el saldo de las mejoras, entregue el inmueble a su
propietaria Asunta El Hage bajo prevenciones de ley en caso de incumplimiento.

II.4. Por proveído de 3 de mayo de 2006, cursante a fs. 12, se evidencia que ante el
incumplimiento del demandado respecto de la entrega del inmueble dispuesto por Auto de 3 de
septiembre de 2003, se dispone se libre mandamiento de desapoderamiento a cumplirse
mediante comisión instruida.

II.5. Mediante memorial de 14 de octubre de 2011, corriente de fs. 13 a 14 vta., la ahora


accionante por intermedio de su abogado y apoderado se apersona en el citado proceso civil
oponiéndose al desapoderamiento alegando que vive más de 50 años en el inmueble, además de
haber constituido un matrimonio de hecho con el demandado Roque El Hage Mendoza .

II.6. Por Auto 171 de 4 de noviembre de 2011, cursante a fs. 22 y vta., ante la solicitud de la
ahora parte accionante y la evidencia del fallecimiento del demandado Roque El Hage Mendoza,
el Juez de la causa dispone la suspensión temporal del mandamiento de desapoderamiento en
tanto se cite a los herederos del demandado Roque El Hage Mendoza mediante edictos en
aplicación al art. 55 del CPC.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 435
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.7. Según memorial de 23 de diciembre de 2011, cursante a fs. 25, Asunta El Hage Mendoza al
haberse cumplido con la citación a los herederos de Roque El Hage Mendoza y ante el hecho de
que ninguna persona se apersonó como tal en el proceso, solicita se libre mandamiento de
desapoderamiento.

II.8. Por decreto de 27 de diciembre de 2011, corriente a fs. 25 vta., se defiere lo solicitado
disponiéndose se libre nuevo mandamiento de desapoderamiento el que cursa a fs. 26.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, alega la vulneración de los derechos de su representado al debido proceso,


igualdad procesal, a la defensa y el principio de legalidad, toda vez que la autoridad demandada
en etapa de ejecución de sentencia libró mandamiento de desapoderamiento para el inmueble
donde vive por más de 50 años, esto dentro de un proceso ordinario sobre reivindicación y
entrega de inmueble seguido a instancia de Asunta El Hage Mendoza contra Roque El Hage
Mendoza; proceso en el cual, en su concepto debió ser demandada como conviviente del
demandado ahora fallecido y ocupante del inmueble, al no haberse procedido en este sentido;
con la presente acción de amparo constitucional pretende la nulidad del citado proceso. En
revisión, corresponde analizar si los actos denunciados ameritan conceder o denegar la tutela
solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional no define derechos controvertidos

El derecho a la propiedad privada ha sido definida por la jurisprudencia constitucional como:


“….la potestad, capacidad o facultad que tiene toda persona para poseer usar y gozar de un
bien sea de carácter material, intelectual, cultural o científico” (SC 0365/2006-R de 12 de abril,
reiterada por la SC 1696/2010-R de 25 de octubre, entre otras).

En cuanto a su tutela, a través de una acción tutelar, la jurisprudencia constitucional ha dejado


claramente establecido que solo es procedente cuando el referido derecho está plenamente
consolidado y acreditado, de tal manera que ante la controversia y falta de prueba no es viable su
tutela; bajo este criterio la SC 0855/2004-R de 3 de junio, estableció que: “…no corresponde a
la jurisdicción constitucional definir derechos como es el de propiedad, ya que el recurso de
amparo brinda protección a los derechos y garantías fundamentales consolidados,
correspondiendo a la justicia ordinaria resolver hechos controvertidos que definen derechos”.

Entendimiento ratificado en la SC 1696/2010-R de 25 de octubre, cuando concluye que: “…no


es posible otorgar la tutela, cuando no existe la prueba suficiente que de certeza que se hubiese
lesionado el derecho a la propiedad privada, puesto que como se explico en el punto
precedente, dada la finalidad de la acción de amparo constitucional, no define derechos que
estén controvertidos, por tanto la controversia del derecho propietario debe dilucidarse en la
jurisdicción ordinaria”.

En el caso presente corresponde dejar constancia, que si bien la jurisprudencia señalada


precedentemente fue asentada por el extinguido Tribunal Constitucional; sin embargo, ésta
resulta válida y aplicable para el Tribunal Constitucional Plurinacional en tanto no sea contraria
a los principios de la Constitución Política del Estado y de la vigente Ley 027 de 6 de julio de
2010; razonamientos que se compatibilizan con la naturaleza y alcance de la acción de amparo
constitucional, ahora contemplada en los arts. 73 y ss. de la mencionada Ley.

III.3. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 436


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la jurisprudencia glosada precedentemente, se infiere que quien se considere afectado en su


interés personal, legítimo y directo que vulnere sus garantías constitucionales, por algún acto o
hecho emanado de persona o autoridad, podrá interponer la acción de amparo constitucional en
defensa de sus derechos acreditando su derecho propietario. Asumiendo este razonamiento al
caso en análisis; se concluye que la ahora accionante dentro el proceso civil sobre reivindicación
y entrega de inmueble seguido a instancia de Asunta El Hage Mendoza contra Roque El Hage
Mendoza no fue ni es parte de este proceso, el cual según antecedentes se encuentra en etapa de
ejecución de sentencia, es decir, existen Resoluciones que cobraron la autoridad de cosa
juzgada, y que que en los más de 15 años de litigio de cuya substanciación, el demandado que
falleció el 13 de noviembre de 2005, según certificado de defunción de fs. 50, hizo uso de los
recursos que le franquea la ley en ejercicio de su derecho a la defensa.

En este antecedente, ante la eventualidad del fallecimiento de una de las partes como ocurrió en
el caso del demandado Roque El Hage Mendoza; de conformidad con el art. 55.I del CPC, el
proceso fue suspendido a objeto de viabilizar la citación de los herederos para que en el plazo de
treinta días asuman defensa, prosiguiendo el juicio en el estado en que se encontrare, en cuya
etapa quienes se considerasen herederos deberían de apersonarse a efecto de hacer valer sus
derechos sucesorios, ya sea en el mismo proceso o en otra instancia, lógicamente demostrando
con el instrumento jurídico pertinente ésta condición lo cual no aconteció en el caso presente.
Cuando la ahora accionante simple y llanamente refiere haber sido conviviente del demando
Roque El Hage Mendoza y que ocupó el inmueble objeto del proceso civil referido durante más
de cincuenta años, sin acreditar estos extremos con prueba alguna.

Por lo precedentemente desarrollado se tiene que, mediante la presente acción tutelar; la parte
accionante pretende que la jurisdicción constitucional al otorgarle la tutela demandada,
implícitamente le reconozca derecho propietario sobre el bien inmueble que supuestamente
ocupo durante 50 años, conjuntamente el señor Roque el Hage Mendoza ahora fallecido con
quién hubiera constituido un supuesto “matrimonio de hecho”; pretensión que no es viable
conforme se tiene expuesto en el Fundamento Jurídico III.1, por cuanto los alcances de la acción
de amparo constitucional se circunscriben a tutelar derechos y garantías plenamente
consolidados y debidamente acreditados, siendo atribución de la justicia ordinaria resolver
derechos controvertidos como son los alegados por la representada del accionante,
consecuentemente corresponde también denegar la tutela por esta causa.

En consecuencia, el Juez de garantías, al haber denegado la tutela solicitada dentro de la acción


de amparo constitucional, ha evaluado en forma correcta los datos del proceso y las normas
aplicables al presente caso.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la
Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela
solicitada.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Madani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 437


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0066/2012


Sucre, 12 abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00075-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 01/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 56 a 57., pronunciada, dentro


de la acción de libertad interpuesta por Pablo Sorioco Surubi contra Humberto Téllez
Alurralde, Juez de Instrucción Mixto y cautelar de San Matías en suplencia legal de su
similar de San Ignacio de Velasco del Distrito Judicial de Santa Cruz; Amparo Canaviri
Tapia, Fiscal de Materia y Freddy Orlando Chinchilla Bellot, Comandante de la Policía de
Frontera de San Ignacio de Velasco.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 24 de enero de 2012, cursante de fs. 4 a 6, el accionante señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro de la investigación por la presunta comisión del delito de abigeato, el 19 de enero de 2012, fue
a declarar ante la Fiscal de Materia de San Ignacio de Velasco y una vez concluida la misma, dispuso
su aprehensión a horas 18:00; posteriormente el 20 del mismo mes y año citado, por la mañana, fue
puesto a disposición del juez cautelar con la imputación formal respectiva, sin embargo, por su
avanzada edad “72 años” tuvo problemas de salud, solicitándole a la Fiscal de Materia, el traslado
inmediato a un centro médico, donde el médico forense dispuso la internación inmediata por padecer
de deshidratación moderada e hipertensión arterial, situación que conllevó que no sea trasladado y
que se suspenda la audiencia cautelar; sin embargo, indica que a la fecha, ya han transcurrido más de
72 horas de su detención ilegal y arbitraria, siendo que no existe ninguna orden de autoridad que haya
dispuesto su detención; agrega que el Ministerio Público quiere incriminarle de un delito que no ha
cometido, como si fuera un ladrón.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos de locomoción, a la dignidad y al debido


proceso, citando al efecto, los arts. 109, 110, 115, 116 y 119 de la Constitución Política del
Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente” la tutela, disponiéndose su inmediata libertad de las celdas de la


policía y de la guardia policial que le custodia en el centro hospitalario, para tal efecto, pide se
libre el mandamiento de libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 438


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 25 de enero de 2012, conforme consta en el acta cursante de fs. 51 a 53 de
obrados, se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación y Ampliación de la acción

El accionante ratificó la acción planteada y amplió la misma, señalando que: el Juez Cautelar
demandado, no celebro la audiencia de medidas cautelares desde el 20 de enero hasta la fecha de
presentación de la acción de libertad.

Con la réplica, el accionante manifestó que, recién se está enterando que la Fiscal de Materia
sabía de la existencia de una suplencia legal por parte de la Dra. Dalia Pedraza Ortiz, Juez de
Cotoca, en todo caso, conocían que el Juez de Instrucción de San Matías era el competente, por
lo que confirma su acción de libertad.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Amparo Canaviri Tapia, Fiscal de Materia, en audiencia informó que: a) Se dispuso la


aprehensión del accionante, el 19 de enero de 2012 a horas 18:00, al encontrarse bastantes
indicios de que el declarante había cometido el delito de abigeato; b) Por solicitud de sus hijos,
el imputado fue trasladado a un centro hospitalario y una vez examinado por un médico forense,
se le internó; y, c) La imputación formal fue presentado ante el Juez cautelar de San Ignacio de
Velasco dentro del término de ley, así consta el cargo de recibido el 20 de enero del mismo año
a horas 16:05.

Con el derecho a la dúplica, refiere que existe un certificado médico que acredita que el
imputado se encuentra hospitalizado; además, cursa en el cuaderno de investigaciones a “fs. 40”,
un informe de la suscrita Fiscal a la Juez de Instrucción de Cotoca, donde se le hace conocer el
20 de enero de 2012 la imputación formal; autoridad que en la misma fecha señaló audiencia
para el 21 del mismo mes y año a horas 10:00, la cual fue suspendida posteriormente con
decreto de la fecha indicada entre tanto se restablezca la salud del imputado quien deberá
guardar internación en el Hospital hasta que se encuentre en condiciones de salud para llevarse a
cabo la audiencia cautelar.

I.2.3. Resolución

Mediante Resolución 01/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 56 a 57, el Juez de Partido Mixto y
de Sentencia de San Ignacio de Velasco, concede la tutela con relación al Juez cautelar,
Humberto Téllez Alurralde y deniega contra la Fiscal de Materia y el Comandante de la Policía;
disponiendo que el Juez que se encuentra en conocimiento del caso, dentro de las 24 horas,
resuelva la situación jurídica del accionante; en base a los siguientes argumentos: 1) La Fiscal de
Materia luego de la declaración del imputado, al constatar la existencia de indicios sobre la
participación en el hecho, requirió su aprehensión; posteriormente dentro del término de ley,
puso a disposición del Juez cautelar al imputado, con la presentación de la imputación formal;
inclusive al conocer de la baja del Juez de San Ignacio de Velasco, comunicó a la Jueza de
Cotoca, por lo que dicha autoridad no ha quebrantado ninguna norma constitucional; 2) Con
relación al Comandante de la Policía, no se ha demostrado actuación ilegal alguna, máxime si
dicha autoridad no ejerce funciones que son de dependencia de la Fuerza Especial de Lucha
Contra el Crimen (FELCC); y, 3) Sobre el Juez cautelar demandado, se constata que su
despacho recibió la imputación formal dentro del término legal y cuando aún estaba en ejercicio

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 439


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de sus funciones no resolvió la imputación, quien en todo caso, debió señalar audiencia a los
fines de definir la situación jurídica del imputado dentro del plazo previsto.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Dentro de la investigación por la presunta comisión del delito de abigeato, la Fiscal de
Materia, Amparo Canaviri Tapia, por Resolución de 19 de enero de 2012, dispuso la
aprehensión del imputado Pablo Sorioco Surubi (fs. 30) a tal efecto emite el mandamiento
correspondiente (fs. 31).

II.2.La Fiscal de Materia, imputó formalmente el 20 de enero de 2012, al ahora accionante,


solicitando la aplicación de medidas cautelares de carácter personal (fs. 39 a 42 y vta.); siendo
que, en memorial de 20 de enero del mismo año, los hijos del accionante, pidieron al Fiscal de
Materia, requiera la internación de su padre Pablo Sorioco Surubi (fs. 34); por requerimiento de
la misma fecha, la Fiscal de Materia, requiere al Comandante de Frontera Policial de San
Ignacio de Velasco, proceda al traslado del imputado, al Hospital Municipal para que el mismo
sea examinado por el médico forense (fs. 36).

II.3.Mediante oficio de 20 de enero de 2012, la Fiscal de Materia, solicita al Presidente del


Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, la habilitación de un Juez de Instrucción
cautelar (fs. 43).

II.4.El informe presentado el 20 de enero de 2012, dirigido a la Jueza de Instrucción Mixto de


Cotoca, la Fiscal de Materia, pone en conocimiento de dicha autoridad, la imputación formal
para que realice la audiencia de medidas cautelares, informando que el Juez de Instrucción de
San Ignacio de Velasco que conocía la investigación, renuncio el 2 de diciembre de 2011 y que
en suplencia legal se encontraba el Juez de San Matías quien por baja médica no se encontraba
trabajando, quedando por tanto en suplencia el Juez de San José de Chiquitos, cargo que se
encuentra acéfalo; llegando a quedar en definitiva en suplencia, el Juez de Cotoca (fs. 38).

II.5.Por decreto de 20 de enero de 2012, la Jueza de Instrucción de Cotoca, señala audiencia de


consideración de medidas cautelares, para el 21 el indicado mes y año a horas 10:00 (fs. 47); por
decreto de la misma fecha, la autoridad dispone la suspensión de la audiencia, hasta que el
imputado se encuentre en condiciones de salud para la medida cautelar, previa valoración
médica (fs. 48).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos; siendo que, el 19 de enero de 2012, fue a
declarar ante la Fiscal de Materia y una vez concluida la misma, dispuso su aprehensión;
posteriormente el 20 del mismo mes y año, en la mañana, fue puesto a disposición del Juez
Cautelar con la imputación formal respectiva, sin embargo, al estar delicado de salud y
hospitalizado, se suspendió la audiencia, encontrándose por más de 72 horas detenido
ilegalmente; agrega que el Ministerio Público quiere incriminarle de un delito que no ha
cometido. En consecuencia, corresponde analizar, si en el presente caso, se debe ingresar o no al
fondo de la problemática planteada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 440


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La SCP 0003/2012 de 13 de marzo, entre otras señalo que: “…La acción de libertad, es un
mecanismo de defensa constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y
reparador, instituido para la protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la
libertad física como de locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o
procesamientos ilegales o indebidos por parte de servidores públicos o de personas
particulares; así como a la vida, cuando ésta se encuentra afectada o amenazada por la
restricción o supresión de la libertad.

Está consagrada por el art. art. 125 de la CPE, cuando dispone que: ´Toda persona que
considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente
procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de
manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal
ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a
su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su
derecho a la libertad´.

Norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional


Plurinacional (LTCP), la cual establece que el objeto de esta acción extraordinaria es la
garantía, protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción,
para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos derechos, en los casos en que sean
restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión.

Teniendo presente la importancia de los derechos primarios protegidos como son la vida y la
libertad física, de manera general no se encuentra regida por el principio de subsidiariedad; al
contrario, se activa sin el previo agotamiento de las vías legales ordinarias, es de tramitación
especial y sumarísima, reforzada por sus características de inmediatez en la protección,
sumariedad, informalismo, generalidad e inmediación; procede contra cualquier servidor
público o persona particular y tampoco reconoce fueros ni privilegios, correspondiendo
conocer y resolver dicha acción constitucional, al Juez en materia penal debido al principio de
especialidad reconocido en la Ley Fundamental.

De manera excepcional opera el principio de subsidiariedad ante la existencia de medios de


impugnación específicos e idóneos para restituir de manera inmediata los derechos objeto de su
protección, o bien cuando se activa de manera paralela un medio de defensa previsto en el
ordenamiento jurídico tanto en la vía constitucional como en la ordinaria” (las negrillas son
nuestras).

III.2. Sobre la legitimación pasiva en la acción de libertad

Con referencia a la legitimación pasiva, la SCP 0055/2012 de 9 de abril, señaló que: “…se
entiende que la misma, es la capacidad jurídica otorgada a la autoridad, funcionario público o
particular para comparecer ante el Juez o Tribunal de garantías constitucionales a efectos de
que emita un informe sobre los actos o hechos que presuntamente vulneran derechos
fundamentales y los cuales se encuentran alegados en la acción constitucional.

Si bien no está explícitamente prevista por la Constitución Política del Estado ni la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (Ley 027), sin embargo, de un análisis objetivo a las
mismas en lo pertinente, se entiende que la acción de libertad se deberá plantear contra:

a) La autoridad o funcionario público que restrinja o suprima los derechos fundamentales


tutelados.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 441


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

b) La persona particular que restrinja o suprima los derechos tutelados.

En este sentido se entiende que la legitimación pasiva en la acción de libertad prevista por el
art. 125 de la CPE, está constituida por aquel o aquellos que hayan lesionado o afectado el
ejercicio de los derechos fundamentales bajo el alcance desarrollado en los Fundamento
Jurídico III.1 de la presente Sentencia, por lo que, se concluye que los actos lesivos contra los
derechos tutelados pueden emanar tanto de la autoridad pública -de cualquier clase- como de
los particulares

(…)”

La misma Sentencia, acogiendo la jurisprudencia existente, indicó que para plantear la acción de
libertad:

La acción deberá ser dirigida contra la autoridad que impartió o ejecutó la orden que dio lugar a
la persecución, aprehensión, detención, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales.

De manera general, estableció que legitimación pasiva se adquiere por la coincidencia que se
da entre la autoridad que presuntamente causó la violación a los derechos y aquélla contra
quien se dirige la acción (SSCC 0103/2010-R y 0691/2001-R).

III.2.1.Excepción en virtud al principio de informalismo

El art. 196.II de la CPE, indica que, el Tribunal Constitucional Plurinacional en su fusión


interpretativa, aplicará como criterio de interpretación, entre otras, la literal del texto; a la luz de
dicho criterio y del análisis del art. 125 de la CPE, se entiende que la acción de libertad se
caracteriza entre otras cosas, en el informalismo, así establece dicha norma al señalar que
cualquier persona podrá plantear la acción de libertad “sin ninguna formalidad procesal” e
incluso de forma oral; aspecto que se encuentra acorde a su naturaleza jurídica de la presente
acción constitucional en función a los derechos primarios que alcanza su ámbito de protección;
de esta forma debe existir una flexibilización en la acción de libertad en el marco del principio
de informalismo, así garantizando un amplio abanico de protección eficaz al derecho de libertad,
misma que adquiere amplia relevancia constitucional a la luz de la Constitución Política del
Estado.

Bajo la característica del informalismo de la acción de libertad mencionada y remitiéndonos a la


jurisprudencia constitucional, se ha establecido que, cuando la acción referida se dirige, por
error, contra una autoridad diferente a la que causó la lesión, pero de la misma institución, rango
o jerarquía e idénticas atribuciones, es posible conceder la tutela, si se verificase lesión al
derecho a la libertad personal. La aplicación del referido razonamiento, no es viable cuando la
presunta lesión de restricción de libertad o su amenaza, hubiese sido dispuesta u ordenada, por
una autoridad distinta a la demandada y que además no pertenezca a la misma institución o fuera
de rango, jerarquía o atribuciones distintas que el demandado (Razonamiento asumido por las
SSCC 0790/2010-R y 1094/2010-R).

Acogiendo esta interpretación, se tiene en el presente caso que, el accionante interpuso la acción
de libertad contra el Juez de Instrucción Mixto Cautelar de San Ignacio de Velasco, autoridad
quien según el informe de la Fiscal de Materia, renunció el mes de diciembre de 2011; sin
embargo de ello, según los datos del proceso, el que efectivamente tenía el control jurisdiccional
de la investigación era la Jueza de Instrucción de Cotoca, razón por la cual y considerando la
naturaleza de la problemática planteada y la igualdad de jerarquía de ambas autoridades, este

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 442


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Tribunal aplicando la excepcionalidad al alcance de la legitimación pasiva, ingresará al análisis


de la acción suscitada, en su caso, sin responsabilidad.

III.3. Análisis del caso concreto

Se alega que, el 19 de enero de 2012, la Fiscal de Materia dispuso su aprehensión y al día


siguiente en la mañana, fue puesto a disposición del Juez Cautelar con la imputación formal; sin
embargo, al constatarse su estado de salud fue hospitalizado, suspendiéndose por ello la
audiencia de medidas cautelares; en consecuencia señala que se encuentra por más de 72 horas
detenido ilegalmente; agrega que el Ministerio Público quiere incriminarle de un delito que no
ha cometido, como si fuera un ladrón.

III.3.1.Con referencia al Juez demandado

Según informan los antecedentes del expediente, y en el marco establecido en el Fundamento


Jurídico III.2.1. de la presente Sentencia, se constata que, el accionante no conocía
efectivamente quien ejercía el control jurisdiccional de la investigación, más aún, encontrándose
hospitalizado por su estado de salud, por ello, dirigió su demanda constitucional contra otra
autoridad que según los datos del expediente había renunciado; asimismo, no se ha demostrado
que el Juez de San Ignacio de Velasco -efectivamente- conoció la imputación formal el 20 de
enero de 2012, como así subjetivamente estableció el Juez de garantías; consiguientemente e
ingresando a las actuaciones de la Jueza de Instrucción de Cotoca, se constata que la misma, por
decreto de 20 de enero de 2012, señaló audiencia de consideración de medidas cautelares para el
21 del indicado mes y año a horas 10:00; y posteriormente, mediante decreto de la misma fecha,
dispuso la suspensión de la audiencia hasta que el imputado se encuentre en condiciones de
salud para la medida cautelar, previa valoración médica; consiguientemente y del análisis del
presente antecedente, se tiene que la autoridad jurisdiccional, no vulneró ningún derecho del
ahora accionante, en todo caso, se evidencia que el imputado se encuentra hospitalizado a
solicitud de sus propios familiares y a requerimiento del Fiscal de Materia, justamente
precautelando los problemas de salud que padecía y que en su momento fueron certificados por
un profesional médico; además de ello, la representante del Ministerio Público informó a la
autoridad jurisdiccional, que el imputado no se encuentra consiente para entender y comprender
su situación jurídica; por ello, menos podría pretenderse que en esas circunstancias se lleve
adelante una audiencia de esa naturaleza, donde se encuentra de por medio un derecho
fundamental como es la libertad.

En este sentido, la Jueza de Cotoca, actuó dentro del marco legal y según procedimiento,
precautelando la vida del imputado, entonces sus actuaciones no lesionaron el derecho a la
libertad ni de locomoción del accionante, porque como se dijo, se encuentra hospitalizado y no
así en celdas de la policía como indica en el “petitium” de su demanda, por eso mismo, su
situación jurídica será resuelta ante autoridad competente en una audiencia de consideración de
medidas cautelares, claro está, una vez se encuentre en las condiciones de salud aptas para que
asuma inclusive su defensa material, de manera que, la Jueza no ha incurrido en acto ilegal
restrictivo de libertad, dado que se encuentra debidamente justificada su actuación, al no ser
resultado de una demora negligente ni es atribuible a una acción u omisión irrazonada de la
referida autoridad.

En consecuencia, el accionante no ha demostrado que se encuentra indebidamente procesado o


privado de su libertad personal, situación que inviabiliza la concesión de la tutela.

III.3.2.Sobre la actuación de la Fiscal de Materia y del Comandante de la Policía

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 443


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Con referencia a la Fiscal de Materia codemandada, se tiene que, mediante Resolución de 19 de


enero de 2012, dispuso la aprehensión del imputado, al haber admitido los hechos denunciados
en su declaración respectiva y al existir elementos de convicción para sostener que es con
probabilidad participe del delito; además de no haber acreditado, familia y trabajo, demostrando
así el peligro de fuga y de obstaculización.

Ahora bien, antes de realizarse la audiencia de medidas cautelares, los hijos del ahora
accionante, solicitaron a la Fiscal de Materia, requiera para el traslado de su padre a un centro
médico asistencial, para poder tratarse los malestares que en esos momentos tenia; petitorio que
fue admitido por requerimiento de 20 de enero de 2012, requiriéndose al efecto, para que el
Comandante de Frontera Policial de San Ignacio de Velasco, proceda al traslado del imputado al
Hospital Municipal, para someterse a un examen médico forense.

Asimismo y según los datos del proceso, se tiene que esta autoridad codemandada, puso en
conocimiento del Juez Cautelar, la imputación y la solicitud de aplicación de medidas cautelares
dentro del plazo previsto por ley, para que de esta forma el juez que ejerce el control
jurisdiccional, defina su situación jurídica del imputado; aspecto que no implica la vulneración
alguna del derecho a la libertad o de locomoción del ahora accionante; en todo caso, se
evidencia que la actuación de la Fiscal fue activa y diligente, quien inclusive solicitó al
Presidente del Tribunal Departamental de Santa Cruz, el 20 de enero del 2012, la habilitación de
un juez de instrucción cautelar, justamente al existir un aprehendido y porque “los plazos en
materia penal son muy cortos” (sic), además, procede a informar respecto a renuncias, bajas
médicas y otras situaciones de los jueces que deberían conocer y definir la situación jurídica del
imputado.

Consiguientemente, la actuación de la Fiscal de Materia, no vulnera el derecho alegado por el


accionante, en todo caso, cumplió cabalmente con el procedimiento otorgándole inclusive,
garantías al imputado respecto a su salud; situación que amerita denegar la tutela.

Con referencia al Comandante de la Policía y según informan los antecedentes del proceso, se
tiene que el mismo, cumplió con el requerimiento fiscal para el traslado del imputado al centro
de salud, a solicitud de sus propios familiares; razón por la cual, al no existir ningún otro
antecedente que diga lo contrario y que demuestre que la vulneración del derecho alegado sea
consecuencia de su actuación, ésta autoridad codemandada no ha vulnerado ni restringido la
libertad de locomoción del accionante y en merito de ello, también se debe denegar la tutela.

III.3.3. Por otra parte, el accionante alega que el Ministerio Público quiere incriminarle de un
delito que no ha cometido, vulnerando de esta forma su dignidad y el debido proceso, como si
fuera un “ladrón” (sic).

Ahora bien, con referencia a este hecho, recordar que el Tribunal Constitucional Plurinacional,
por mandato de lo previsto por el art. 196 de la CPE, velará por la supremacía de la
Constitución, ejercerá el control de constitucionalidad y precautelará el respeto y la vigencia de
los derechos y las garantías constitucionales; en este sentido, ésta jurisdicción, tiene un estatus
de órgano constitucional independiente y distinto de los demás, cuyos actos, decisiones o
resoluciones controla, de manera que, en el ejercicio de su función jurisdiccional, no está
subordinado ni sometido sino a la Constitución y a las leyes; bajo esa configuración, se entiende
que el Tribunal Constitucional Plurinacional tiene limitaciones para conocer -en este caso-
aspectos inherentes al fondo, por una parte, de una investigación que se encuentra plasmada de
principios que rige el sistema procesal penal boliviano y por otra, la culpabilidad o no del
procesado; hechos que deben ser conocidos y resueltos por las autoridades competentes en el
ámbito de la jurisdicción ordinaria penal; en este sentido, el art. 42 del CPP, establece que,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 444
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

corresponde a la jurisdicción penal, el conocimiento exclusivo de todos los delitos, así como la
ejecución de resoluciones; la misma norma aclara que la jurisdicción penal es irrenunciable e
indelegable, claro está con las excepciones establecidas en el Código de Procedimiento Penal.
De lo referido, se tiene definido un ámbito de limitaciones potestativas de cada jurisdicción y
por ende, éste Tribunal Constitucional Plurinacional, no puede ingresar al fondo de
controversias que deben ser dilucidadas en el -proceso penal- el cual se encuentra estructurado
en etapas y fases que están bien delimitadas, donde cada una cumple una importante y
fundamental función hasta llegar a establecer la culpabilidad o inculpabilidad y, en su caso, la
responsabilidad penal del imputado y procesado, por todo ello, debe quedar claro que la
jurisdicción constitucional se activa mediante la presente acción especial, cuando dentro del
desarrollo de una investigación o del proceso penal, se hayan vulnerado derechos y garantías
constitucionales que se encuentren conexos y vinculados con la vida, libertad y locomoción, y
que no hayan sido restablecidos internamente por las autoridades competentes de esa
jurisdicción, con excepción como se dijo, cuando el derecho a la vida se encuentra en peligro; en
coherencia con ello, la SCP 0005/2012, señaló que: “si se evidencia la existencia de
procedimientos -aptos- para la efectiva tutela del derecho que se dice vulnerado, bastara para
que el Juez o Tribunal de garantías y en su caso, el Tribunal Constitucional Plurinacional
deniegue la acción de libertad”; consiguientemente, éste Tribunal Plurinacional: i) No ejerce ni
promueve la acción penal pública, esta facultad corresponde al Ministerio Público (art. 225 de la
CPE y 70 del CPP); y, ii) No es Juez o tribunal de la justicia ordinaria; entonces, menos puede
atender la pretensión del ahora accionante; en el mismo sentido, el art. 43 del CPP, reconoce los
siguientes órganos jurisdiccionales penales: a) Los unipersonales, denominados Jueces de
instrucción, de sentencia y de ejecución penal; y otros de carácter colegiado como; y, b)
Tribunales de sentencia, compuestos por dos jueces técnicos y tres jueces ciudadanos, los
tribunales departamentales y el Tribunal Supremo de Justicia, en sus Salas penales; la
especificación de estos Tribunales, no es más que una manifestación de la -exclusividad- e
integridad de la jurisdicción penal y que no pueden ejercer otras funciones que las estrictamente
jurisdiccionales, las cuales están reconocidas en los arts. 179.1 de la CPE y 50 al 55 del CPP;
entonces, se tiene que el Juez o tribunal que sea competente para conocer un proceso penal, lo
será también para decidir todas las cuestiones e incidentes que se susciten en el curso de su
tramitación, así como para determinar situaciones emergentes de cada etapa del proceso penal;
ahora bien, el art. 44 del CPP, prevé que la competencia penal de los jueces es improrrogables y
se rige por las reglas respectivas de la ley orgánica y del procedimiento respectivo, esta norma
alude a la competencia material que viene a ser según Roxin, la distribución de los asuntos
judiciales, según su clase o su gravedad, entre los distintos órganos de decisión judiciales
penales.

Finalmente es importante señalar que, no se ha demostrado que la dignidad y debido proceso


denunciados mediante la presente acción constitucional, se encuentren conexos con el derecho a
la libertad del imputado; correspondiendo en consecuencia, denegar la tutela.

En consecuencia, la Jueza de garantías, al haber concedido la acción de libertad, no ha evaluado


en forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º REVOCAR en parte la Resolución 01/2012 de 25 de enero, cursante de fs. 56 a 57; y, en


consecuencia
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 445
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

2º DENEGAR la tutela, también contra el Juez codemandado; sin embargo, considerando lo


dispuesto por el Juez de garantías respecto a la realización de la audiencia cautelar dentro de las
24 horas y bajo una interpretación previsora, se dimensionan los efectos de la resolución del
Juez de garantías, dejándolos subsistentes.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0068/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad:
Expediente: 00014-2012-01-AL
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución de 14 de enero de 2012, corriente de fs. 24 a 28, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Joel Wenceslao Sarzuri Marca contra Freddy
Hurtado Méndez, Juez Segundo de Instrucción Mixto y cautelar de Villazón del Distrito
Judicial de Potosí.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 13 de enero de 2012, cursante de fs. 10 a 11 vta., el accionante


expone los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Hace más de diez meses que se encuentra con detención preventiva por la presunta comisión del
delito de violación, sin embargo el Juez cautelar no ha cumplido con la obligación de ejercer el
control jurisdiccional de acuerdo con lo previsto con los arts. 54.1 y 134 del Código de
Procedimiento Penal (CPP).

El 11 de enero de 2012, en la audiencia de consideración de cesación a su detención preventiva,


y pese a que sus abogados presentaron la Resolución fundamentada de sobreseimiento emitida
por el Fiscal de Materia con la que él fue notificado, se rechazó la solicitud por no contarse con
el pronunciamiento del Fiscal de Distrito que confirme o revoque la determinación del
sobreseimiento, desconociendo la interpretación que al efecto hace la SC 1071/2011-R. Al día
siguiente se presentó un memorial adjuntando jurisprudencia sobre la interpretación y los efectos
de la resolución de sobreseimiento; sin embargo, hasta la fecha no se resuelve su petición.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 446


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la “seguridad


jurídica”, sin mencionar la norma constitucional que los contiene.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela disponiendo, el pago de daños y perjuicios y la remisión de


antecedentes ante el Ministerio Público por el delito de incumplimiento de deberes.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 14 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 17
a 24 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante ratificó el contenido de la acción de libertad, aclarando lo


siguiente: a) La resolución de sobreseimiento es igual a una sentencia absolutoria y debe
expedirse mandamiento de libertad, conforme SSCC 1071/2011-R y 1175/2012-R; y b) La
autoridad accionada tenía conocimiento de la Resolución de sobreseimiento en la audiencia de
cesación de detención preventiva, debido a que el Fiscal así lo hizo conocer.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

La autoridad en audiencia manifestó que la presente acción no tiene fundamento jurídico, puesto
que una vez que termina una investigación es el fiscal quien debe presentar requerimiento
conclusivo ante el Juez de Instrucción en lo Penal que conoce la causa, decretando de manera
fundamentada el sobreseimiento cuando resulte que el hecho no existió, no constituye delito o el
imputado no participó en el hecho ilícito y, en todo caso, debe exponerse los motivos por las
cuales está dando curso al sobreseimiento. En auto revisado el cuaderno de control
jurisdiccional, no existe ni ha sido presentada la Resolución de sobreseimiento del Fiscal como
acto conclusivo.

El abogado de la autoridad demandada ratificó los términos del informe presentado, refiriendo
que el Fiscal encargado de la investigación no presentó ningún informe conclusivo, y que la
autoridad fiscal, conforme a lo previsto por el art. 324 del CPP, debe poner en conocimiento de
las partes el sobreseimiento decretado, que puede ser impugnado dentro de los cinco días
siguientes a su notificación y recibida la impugnación si se la formulare o de oficio, en el caso
de no existir querellante, el fiscal debe remitir antecedentes al fiscal superior jerárquico dentro
las veinticuatro horas siguientes, para que se pronuncie en el plazo de cinco días. En el presente
caso -sostiene- no se presentó ningún requerimiento conclusivo, por consiguiente no se vulneró
norma alguna o derecho del accionante, por lo que pide se deniegue la acción de libertad, con
imposición de costas.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, Raúl Zarate Condori, Juez Primero de Instrucción Mixto y cautelar de
Villazón, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución de 14 de enero de 2012,
cursante de fs. 24 a 28, denegando la acción de libertad, conminando a la autoridad demandada
que, previa las formalidades de rigor, “en un plazo de 48 horas resuelva y conmine al señor
representante del Ministerio Público a presentar la respuesta al decreto de 13 de enero de 2012”,
llamándole la atención por no haber cumplido los plazos procesales.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 447


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Remitido el expediente ante este Tribunal y producido el respectivo sorteo, de conformidad a ley,
por AC 013-A/2012-CA/S de 28 de febrero, se dispuso requerir al Juez Segundo de Instrucción
Mixto de Villazón y al Fiscal de Distrito de Potosí, la remisión de documentación complementaria,
así como la suspensión del plazo para la emisión de la presente Resolución (fs. 31 y 32),
habiéndose reanudado éste, por decreto de 28 de marzo de 2012 (fs. 61).

Se aclara que el número 2012-24990-01-AL, con el que figuraba el presente expediente ha sido
reasignado con el número de expediente 00014-2012-01-AL, por haberse dispuesto por el Pleno
del Tribunal Constitucional Plurinacional, nueva numeración.

II. CONCLUSIONES

Efectuada la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes


conclusiones:

II.1. Por Resolución de 3 de marzo de 2011, el Juez Segundo de Instrucción en lo Penal dispuso
la detención preventiva de Joel Wenceslao Sarzuri Marca (fs. 49 a 51). El 7 de diciembre de
2011, el accionante solicitó cesación de su detención preventiva, habiendo el Juez demandado,
fijado audiencia para el 16 de diciembre del citado año (fs. 53 y vta.).

II.2. El 7 de diciembre de 2011, el accionante solicitó cesación de su detención preventiva,


señalándose al efecto audiencia para el 16 del mismo mes y año (fs. 53 y vta.), audiencia que fue
suspendida a solicitud del Fiscal de Materia, fijándose nueva fecha para el 30 del citado mes y
año (fs. 54 y vta.), oportunidad en la que, al no haber sido notificada la víctima, la audiencia fue
suspendida para el 6 de enero de 2012 (fs. 55); sin embargo, la misma también se suspendió, por
no haberse podido notificar a la víctima, disponiéndose por ello la notificación mediante cédula
y señalándose la nueva audiencia para el 11 del referido mes y año (fs. 57).

II.3. El 26 de diciembre de 2011, el Fiscal de Materia, Javier Alonzo Torrejón Tuco, dispuso el
sobreseimiento de la denuncia interpuesta e imputación contra Joel Wenceslao Sarzuri Marca,
ordenándose la notificación de las partes y la posterior remisión de dicha Resolución ante el
fiscal superior jerárquico y disponiendo luego: “devuélvase a despacho para su trámite legal”
(sic) ante el órgano jurisdiccional (fs. 38 a 40).

II.4. El 6 de enero de 2012, fueron notificados con la Resolución de absolución, el accionante, el


representante de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y, mediante cédula, a la madre de la
víctima (fs. 41).

II.5. Por Resolución 013/2012 de 16 de enero, el Fiscal de Distrito de Potosí, Sandro Fuentes
Miranda ratificó el sobreseimiento emitido por el Fiscal de Materia (fs. 42 a 45).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que la autoridad judicial demandada vulneró su derecho a la libertad, al


debido proceso y a la “seguridad jurídica”, porque pese a que existe Resolución de
sobreseimiento en su favor, emitida por el Fiscal de Materia, no se ha dispuesto su libertad. Por
consiguiente, en revisión, corresponde dilucidar si los hechos denunciados son evidentes, si en el
caso concreto se vulneró los derechos aludidos por el accionante y si tal vulneración puede ser
tutelada mediante la acción de libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 448


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.1. Antes de entrar a la consideración sobre la Resolución y antecedentes de la acción de


libertad elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a la acción de
libertad instituida en la Constitución Política del Estado, con relación, particularmente a los
derechos a la vida y a la libertad personal, así como a la naturaleza de la institución jurídica
constitucional y el entendimiento de la jurisprudencia constitucional, remarcando, tal como
prevé la Norma Fundamental, el enunciado normativo sobre las formas de resolución en las
acciones de libertad.

III.1.1. El derecho a la vida y a la libertad personal en la Constitución


Política del Estado

Bolivia es un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, que sustenta, entre
otros valores, la dignidad y libertad de las personas, tal como establece el art. 8 de la
Constitución Política del Estado (CPE); además que también, en su art. 22, expresamente
establece que “La dignidad y la libertad de la persona son inviolables” y “Respetarlas y
protegerlas es deber primordial del Estado”.

Si bien estos enunciados hacen referencia a la libertad, lo hace en su acepción más general,
como expresión normativa del valor libertad, lo cual supone, para cada individuo o colectividad,
la posibilidad de actuar de forma autónoma como partícipe en la sociedad, en todos sus ámbitos
posibles y, en general, exenta de todo tipo de restricciones, salvo las establecidas en el sistema
normativo constitucional.

Dentro del sin número de libertades o derechos -según se vea- que la teoría o doctrina podría
referir, o que la norma y la jurisprudencia constitucional han establecido, se encuentra la libertad
personal, la misma que conforme precisa en el art. 23.I de la Ley Fundamental, refiere que
“Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal” y que esta libertad personal
“sólo podrá ser restringida en los límites señalados por la ley, para asegurar el descubrimiento de
la verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales”, luego entonces, la libertad
de la persona es aquél derecho fundamental y constitucional que no sólo que debe ser respetado
sino debe ser protegido por el Estado.

Por cierto, con el salvamento del numeral IV del citado art. 23 de la CPE, en el sentido que toda
persona que sea encontrada en delito flagrante podrá ser aprehendida por cualquier otra persona,
aun sin mandamiento, con el único objeto de que sea conducido ante autoridad competente; de
conformidad al parágrafo III del señalado artículo: “Nadie podrá ser detenido, aprehendido o
privado de su libertad, salvo en los casos y según las formas establecidas por la ley” y que “La
ejecución del mandamiento requerirá que éste emane de autoridad competente y que sea emitido
por escrito”.

En otro orden, el art. 15.I de la CPE, consagra que “Toda persona tiene derecho a la vida y a la
integridad física, psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos crueles, inhumanos,
degradantes o humillantes
(…)”.

Así, la Constitución Política del Estado, al tiempo de señalar en el art. 14.I, que los derechos
reconocidos por ella, entre otros caracteres, son inviolables, establece que el Estado tiene el
deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos.

III.1.2. De la acción de libertad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 449


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La Constitución Política del Estado, en la Sección I, del Capítulo Segundo (Acciones de


Defensa) del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte
(Bases fundamentales del Estado - Derechos, deberes y Garantías) ha instituido la acción de
libertad. En ese marco, el art. 125 establece: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

El art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional LTCP, al referirse al objeto de la


acción de libertad, señala lo siguiente: “Es una acción constitucional extraordinaria de
tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión”.

La acción de libertad, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que la Ley


Suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección inmediata tanto
del derecho a la vida así como de aquellas situaciones en las que el derecho a la libertad física de
las personas se encuentra lesionada por causa de una ilegal persecución, indebido procesamiento
o indebida privación de libertad; en este último caso, siempre que el ordenamiento jurídico
ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para reparar la lesión producida, pues, de existir
dicho medio, deberá hacerse uso de éste.

Desde otra perspectiva, para la consideración y resolución de la acción de libertad, debe tenerse
en cuenta que los ámbitos de protección se diferencian por el derecho que protegen: 1) derecho a
la vida; 2) derecho de locomoción, en tanto esté amenazado el derecho a la libertad personal; 3)
derecho al debido proceso, en cuanto esté restringido el derecho a la libertad personal y 4)
derecho a la libertad personal, por haberse privado al margen de la Constitución Política del
Estado y la ley.

III.1.3. Sobre las formas de resolución de las acciones de libertad

La acción de libertad tiene por objeto determinar si la vida de una persona está en peligro y, en
cuanto a la libertad personal se refiere, si la persona esta indebidamente privada de libertad o
está siendo ilegalmente perseguida o indebidamente procesada; en estos dos últimos casos,
cuando la persecución o procesamiento está vinculado a la restricción del derecho a la libertad
personal.

Según se presenten los hechos y dilucide el ámbito de protección cuya tutela se demanda, así
también, la resolución que emita el juez o tribunal llamado a conocer la acción de libertad,
determinará lo que corresponda. Así, el art. 125 de la CPE, nos señala que la persona que
considere que su vida está en peligro, solicitará que se guarde tutela a su vida; la que crea estar
ilegalmente perseguida, que cese la persecución indebida o la que cree estar indebidamente
procesada o privada de libertad personal, se restablezcan las formalidades legales o se restituya
su derecho a la libertad. Dicho de otro modo, en la acción de libertad, al margen de los casos en
los que se tutela el derecho a la vida o de locomoción (por persecución ilegal en la que esté en
riesgo el derecho a la libertad física de la persona), el juez competente, o puede disponer la
restitución de la libertad o mandar a que se restablezcan las formalidades, particularmente
cuando de las lesiones al debido proceso en tanto éstas estén relacionadas con el derecho a la
libertad física de las personas.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 450
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2. Sobre el sobreseimiento pronunciado por el Ministerio Público

La jurisprudencia constitucional en distintas ocasiones se pronunció en cuanto al tema de


sobreseimiento, así, mediante la SC 1071/2011-R de 16 de agosto, se fueron mencionando otros
precedentes pronunciados al respecto, y en su caso, remarcando la línea jurisprudencial que
acentuaban las sentencias.

Así, la SC 1071/2011-R antes referida señala:

“A través de la SC 1406/2005-R de 8 de noviembre, refiriéndose a la actuación del Fiscal en


estos casos, señaló que: 'su función cuando dicta un sobreseimiento, no culmina con el mero
acto formal de dictarlo, pues al conocer la ratificatoria tiene que hacer efectivo el
requerimiento de sobreseimiento, de manera que de haber imputados detenidos preventivamente
tiene que comunicar de su sobreseimiento ante la autoridad competente, a fin de que sean
liberados inmediatamente; vale decir que no puede simplemente limitarse a que luego de haber
emitido su requerimiento de sobreseimiento, el Fiscal superior en grado emita su decisión
confirmatoria o revocatoria, pues a partir de este momento aún tiene obligaciones, como ser la
de -se reitera- hacer efectiva la libertad de los imputados detenidos preventivamente, porque de
no hacerlo no se podría sustentar ni invocar que se aplicó justicia material en el caso concreto,
sino simplemente una justicia formal que en los hechos no es justicia, de ahí que el Fiscal al
tener como función principal velar por ella, debe hacerla efectiva, y en el caso de dictar un
sobreseimiento y conocer de su ratificatoria, como se ha referido debe asegurarse que los
efectos del mismos sean cumplidos'.

Consecuentemente, bajo este entendimiento, significa que cuando el sobreseimiento ha sido


ratificado por el Fiscal de Distrito, el Fiscal del caso, debe poner de inmediato a conocimiento
de la autoridad jurisdiccional contralora de los derechos y garantías constitucionales, a objeto
de que ordene se libre el respectivo mandamiento de libertad a favor del imputado detenido
preventivamente, y cesen las medidas cautelares que le fueron impuestas.

No obstante, posteriormente a través de la SC 1230/2006-R de 1 de diciembre, haciendo


mención a los efectos del sobreseimiento señaló que: '…la autoridad judicial competente
cuando el imputado se encuentra detenido preventivamente debe librar el mandamiento de
libertad en los casos de requerimiento conclusivo de sobreseimiento y de sentencia absolutoria,
pues en ambas situaciones corresponde la cesación de medidas cautelares conforme lo disponen
los arts. 324 tercer párrafo y 364 primer párrafo del CPP; en cuya virtud, en coherencia con lo
establecido por el segundo párrafo de esta última disposición legal, que establece que la
libertad del imputado se ordenará aún cuando la sentencia absolutoria no esté ejecutoriada” en
ese sentido, concluyó indicando que: 'similar razonamiento puede aplicarse cuando se emita
requerimiento conclusivo de sobreseimiento, si acaso el imputado se encuentra sujeto bajo la
medida cautelar de detención preventiva,…'; por cuanto, añadió que: '…si bien la parte in fine
del tercer párrafo del art. 324 del CPP establece que cuando el fiscal superior ratifica el
sobreseimiento, éste dispondrá la conclusión del proceso con relación al imputado en cuyo
favor se dictó, la cesación de las medidas cautelares y la cancelación de sus antecedentes
penales, ello no debe llevarnos a concluir en forma taxativa, que recién podrá emitirse el
mandamiento de libertad una vez que sea ratificado el indicado sobreseimiento; un
razonamiento contrario, implicaría que no obstante que existe un sobreseimiento a favor del
imputado éste se vea sujeto a las emergencias de la ejecutoria de esa resolución, cuando en los
hechos la utilidad procesal de la detención preventiva ha desaparecido a raíz de que no resulta
justificable mantener privado de libertad a aquel imputado sobre el que no existen suficientes
elementos de prueba para fundamentar la acusación formulada en su contra; o por el contrario,
se llega a la convicción de que no participó en el delito atribuido, o finalmente el hecho no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 451
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

existió o no constituye delito; es decir, desaparecieron los presupuestos que determinaron la


detención; y si bien resulta evidente que el fiscal superior puede revocar el sobreseimiento,
mantenerlo privado de su libertad hasta esa probable resolución no guarda coherencia con el
principio de favorabilidad contenido en el art. 7 del CPP…'.

Jurisprudencia que establecía, que para librar el mandamiento de libertad, no es necesario


esperar que el sobreseimiento sea ratificado por el Fiscal de Distrito, es decir que adquiera
ejecutoria, pudiendo librarse estando en trámite la impugnación o revisión de oficio (las
negrillas nos corresponden)

En cuanto al procedimiento del sobreseimiento y los plazos en los cuales deben realizarse, la
misma Sentencia Constitucional citada precedentemente estableció que: “…para la correcta
aplicabilidad de los plazos precisados en el art. 324 del CPP, deben regirse de la siguiente
manera: 1) El fiscal inferior, una vez presentado el sobreseimiento al juez, sea con impugnación
o de oficio, deberá remitir dicho actuado, dentro del plazo máximo de veinticuatro horas ante el
Fiscal de Distrito a efectos de su revisión; 2) El Fiscal de Distrito, o superior jerárquico, una
vez recibido el sobreseimiento, emitirá resolución de ratificación o de revocatoria al
sobreseimiento, según sea el caso, indefectiblemente dentro de los cinco días siguientes; es
decir, que hasta ese momento, sólo pueden sumarse seis días; 3) Una vez transcurrido el lapso
señalado, computado desde de la presentación del sobreseimiento, sin que el Fiscal de Distrito
se haya pronunciado en cualquiera de sus formas, el juez a cargo del proceso, dispondrá la
libertad inmediata del imputado sobreseído, porque los motivos que fundaron su detención
preventiva, 'suficientes indicios para sostener con probabilidad que es autor o participe del
hecho punible', sostenidos inicialmente por el fiscal, al momento de la imputación y el
requerimiento de medidas de coerción personal, como efecto del sobreseimiento han
desaparecido, o sea, hacen insostenible mantenerlas; y, 4) No obstante, de ninguna manera
podría reputarse, que el sobreseimiento se hubiese ejecutoriado, dado que la ley así no lo prevé,
por ello; en caso de revocatoria al sobreseimiento, conforme se señaló anteriormente, el fiscal
inferior, queda compelido a presentar acusación ante el juez y o tribunal de sentencia, lo que
implica que las medidas cautelares impuestas anteriormente y que cesaron, de considerarse
necesarias, deberán ser reanalizadas, previa concurrencia de los requisitos para su
determinación en base a los nuevos presupuestos para su fundamentación, porque reiteramos,
en el momento de la presentación del sobreseimiento ante el juez de la causa, el elemento de
posible autoría o participación en el hecho sindicado, desapareció; y si bien el fiscal superior
puede revocar el mismo, no será posible mantener privado de su libertad al imputado si es que
previamente, no se volvió a establecer la existencia de los requisitos exigidos por el art. 233 del
CPP con relación al 234 y 235 del mismo cuerpo legal” (las negrillas y subrayado nos
corresponden).

III.4. De la necesaria modulación del entendimiento que se tiene sobre la potestad del juez
cautelar de disponer la libertad en los casos de sobreseimiento

La acción de libertad, procede -además de los casos en los que esté amenazado la vida o el
derecho de locomoción en tanto este amenazada el derecho a la libertad- cuando una persona
está indebidamente privada de libertad al margen de la Constitución Política del Estado y la ley
y, cuando la persona estando sometida a un proceso existe una lesión al derecho al debido
proceso y siempre que dicha lesión pueda relacionar con el derecho a la libertad. En este último
caso, en el que deberá partirse del presupuesto que la pretensión no es dilucidar sobre una
presunta indebida privación de libertad sino de una presunta vulneración al debido proceso, no
puede omitirse que tanto las autoridades judiciales como administrativa, así como los sujetos
procesales están sometidos al cumplimiento de la ley, y en ese contexto, al procedimiento penal.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 452


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Código de Procedimiento Penal establece los pasos e instancias de un proceso así como
refiere con la claridad sobre el procedimiento en cuanto al sobreseimiento se refiere. Así,
establece que el Ministerio Público, que desarrolla en esencia una actividad administrativa y en
la que, la determinación del sobreseimiento por parte del fiscal de materia, tiene la calidad de
determinación conclusiva, sólo causa efectos cuando la misma no ha sido impugnada por las
partes; en cambio, cuando no sucede ello; es decir, cuando la resolución del fiscal de materia ha
sido impugnada o cuando no existe parte querellante, tal determinación -en el último caso, de
oficio- debe remitirse ante el Fiscal de Distrito para que se pronuncie, y si la resolución de este
último confirma el sobreseimiento, recién, la determinación del Fiscal de Materia, adquiere la
calidad de una resolución conclusiva, capaz de tener efectos.

Así, el entendimiento al que se refiere la SC 1071/2011-R de con relación a la SC 1406/2005-R


de 8 de noviembre, es correcto al señalar: “cuando el sobreseimiento ha sido ratificado por el
Fiscal de Distrito, el Fiscal del caso, debe poner de inmediato a conocimiento de la autoridad
jurisdiccional (…), a objeto de que ordene se libre el respectivo mandamiento de libertad a
favor del imputado detenido preventivamente, y cesen las medidas cautelares que le fueron
impuestas” (las negrillas nos corresponden).

La misma SC 1071/2011-R, al referirse a su similar 1230/2006-R de 1 de diciembre, alude a que


la misma concluye que la autoridad judicial competente:”… debe librar el mandamiento de
libertad en los casos de requerimiento conclusivo de sobreseimiento y de sentencia
absolutoria” (las negrillas nos corresponden), pues, en ambas situaciones -según la citada
Sentencia- “… corresponde la cesación de medidas cautelares”. La SC 1230/2006-R, dice: “…
para librar el mandamiento de libertad, no es necesario esperar que el sobreseimiento sea
ratificado por el Fiscal de Distrito, es decir que adquiera ejecutoria, pudiendo librarse
estando en trámite la impugnación o revisión de oficio” (las negrillas nos corresponden).

La SC 1071/2011-R, modulando los citados precedentes, concluye que: “Una vez transcurrido
el lapso señalado, computado desde de la presentación del sobreseimiento, sin que el Fiscal de
Distrito se haya pronunciado en cualquiera de sus formas, el juez a cargo del proceso,
dispondrá la libertad inmediata del imputado sobreseído…” (Las negrillas nos corresponden).

La aludida SC 1071/2011-R, en otras palabras y en el orden práctico, asume como una


determinación correcta el que el juez disponga la libertad del imputado al sólo transcurso del
tiempo que la ley otorga al Fiscal de Distrito para pronunciarse sobre el sobreseimiento
dispuesto por el fiscal de materia y que se le hubiera dado a conocer formalmente a la autoridad
jurisdiccional; entendimiento que no se explica sino a partir del entendimiento del precedente de
la SC 1230/2006-R, que identifica a la resolución de sobreseimiento emitido por el fiscal de
materia con una sentencia absolutoria; sin embargo, este Tribunal con relación a la aplicación
de las normas relativas al sobreseimiento, en particular, asume que la ley determina un
procedimiento tal, que la determinación del fiscal de materia, de ninguna manera puede ser
comparada, o peor, asimilada, a una sentencia absolutoria, pues ésta, no sólo que es pronunciada
por una autoridad jurisdiccional, sino que la Sentencia que ésta pronuncia, es el resultado de un
proceso y que por su propia naturaleza, difiere en mucho de una etapa investigativa en la que, es
deber del Ministerio Público, asegurarse que el sobreseimiento al que arribe como conclusión,
en algunos casos, debe imprescindiblemente merecer el pronunciamiento del Fiscal del Distrito,
cuyo procedimiento, dicho sea de paso, exige que el fiscal de materia eleve los actuados dentro
de las veinticuatro horas ante el Fiscal del Distrito quien deberá pronunciarse en cinco días.

De esta manera, esta Sala, concluye que es preciso dejar de lado el entendimiento que
sobre el tema fueron expuestos en las SSCC 1071/2011-R y 1230/2006-R y retomar el
entendimiento de la SC 1406/2005-R de 8 de noviembre, en el sentido que la resolución
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 453
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conclusiva de sobreseimiento emitida por el fiscal de materia debe de manera


imprescindible contar con el pronunciamiento del Fiscal de Distrito en los casos que dicha
resolución haya sido impugnada o, de oficio, cuando no exista parte querellante; sin que en
esos casos le esté permitido al juez tomar la decisión de disponer la libertad del imputado.

A mayor abundamiento debe entenderse que si el Ministerio Público si se demora en su


tramitación, debe acudirse al juez cautelar para que éste inste al Ministerio Público a sujetarse a
los plazos que determina la ley; un entendimiento contrario, impondría más bien, que el juez
obre la margen de la ley, y que la justicia constitucional soslaye el principio de legalidad y a
título de aplicar el principio de favorabilidad, ignore que una norma se presume constitucional
entre tanto no sea el órgano de control de constitucionalidad el que determine su
inconstitucionalidad.

En cualquier caso, si se tratara de un indebido procesamiento en el que de por medio está la


libertad de la persona, corresponderá a este Tribunal disponer que se reparen los procedimientos
y no la libertad, pues, como se ha dicho, no se trata de una indebida privación de libertad sino de
un presunto indebido procesamiento de una persona que está sometido a un proceso, sujeta a la
ley.

Desde otra perspectiva, partiendo del presupuesto de que no se dilucidaría una indebida
privación de libertad, así como el Ministerio es titular de la acción penal y por consiguiente
puede concluir por el sobreseimiento, el Juez por otra parte, es quien toma la determinación
legal de la detención preventiva que es una medida cautelar con el fin de asegurar la presencia
del imputado en la tramitación del proceso con el fin de que asuma su responsabilidad penal
sabiendo que tal medida extraordinaria sólo procede en los casos específicamente señalados por
ley y, entre ellos, fundamentalmente, que existan suficientes indicios racionales de la comisión
del delito por parte del imputado. En este último contexto, el Juez cautelar puede modificar o
determinar la cesación de las medidas cautelares cuando las causas que originaron la
determinación de una medida como la detención preventiva ya no existe; así también podrá
obrar, el Tribunal de alzada si acaso se hubiera apelado de la determinación del inferior.

En suma, la configuración procesal sobre los aspectos que se refieren al sobreseimiento no es


sino el desarrollo de la norma constitucional que se expresa a través de la Ley del Ministerio
Público o, entre otras, por medio de la ley procesal adjetiva.

III.5. Análisis del caso concreto

En el presente caso, más allá que dentro del proceso penal instaurado contra el accionante por el
delito de violación, éste fuera detenido preventivamente desde el 3 de marzo de 2011 y
posteriormente solicitara la cesación de su detención preventiva cuya audiencia fue suspendida
en varias ocasiones; el accionante alega que el Fiscal de Materia dispuso el sobreseimiento
del proceso en la investigación iniciada en su contra y que el Juez demandado, a pesar de
habérsele anunciado sobre tal determinación, no dispuso su libertad inmediata, como
señala la jurisprudencia constitucional.

Para la determinación de si evidentemente se ha vulnerado los derechos del accionante


corresponde:1) Tener claridad sobre el marco legal sobre el cual la solicitud de tutela se ampara
para alegar la violación al debido proceso; 2) La jurisprudencia constitucional que sobre esas
normas existe o sobre los casos concretos que haya dilucidado; y, 3) Constatar si los hechos
denunciados son evidentes. En ese orden, en el Capítulo VI, de la conclusión de la etapa
preparatoria, inserta en el Título I sobre esta etapa del juicio que desarrollada sobre el
procedimiento común en el Libro Primero del Código de Procedimiento Penal; el art. 323,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 454
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

refiere que cuando el fiscal concluya la investigación, presentará ante el juez de instrucción la
acusación, requerirá la suspensión condicional del proceso o declarará de manera fundamentada
el sobreseimiento. En efecto el inciso 3) del citado artículo señala: “Decretará de manera
fundamentada el sobreseimiento, cuando resulte evidente que el hecho no existió, que no
constituye delito o que el imputado no participó en él, y cuando estime que los elementos de
prueba son insuficientes para fundamentar la acusación”. En los dos primeros casos, previstos en
los inciso 1) y 2), remitirá al juez o tribunal las actuaciones y evidencias.

Por su parte, el art. 324 de la citada norma, con relación a la impugnación del sobreseimiento,
determina que el fiscal pondrá en conocimiento de las partes el sobreseimiento decretado, el que
podrá ser impugnado dentro de los cinco días siguientes a su notificación y, entre otras
previsiones, que “recibida la impugnación, o de oficio en el caso de no existir querellante, el
fiscal remitirá los antecedentes dentro de las veinticuatro horas siguientes, al fiscal
superior jerárquico para que se pronuncie en el plazo de cinco días”.

En el caso de examen, es evidente que el Fiscal de Materia, Javier Alonzo Torrejón Tuco,
dispuso el sobreseimiento de la denuncia interpuesta e imputación contra el accionado, lo que
inicialmente da lugar a examinar la jurisprudencia constitucional, la misma que como se tiene
dicho en el Fundamento Jurídico III.4 no puede sino entenderse, a la luz de las normas citadas
precedentes y en resguardo del principio de legalidad, que la Resolución conclusiva de
sobreseimiento emitida por el Fiscal de Materia debe de manera imprescindible contar con el
pronunciamiento del Fiscal de Distrito en los casos que dicha Resolución haya sido impugnado
o, de oficio, cuando no exista parte querellante; sin que en esos casos le esté permitido al Juez
tomar la decisión de disponer la libertad del imputado.

No obstante, sea cual fuere el caso; si bien existe evidencia de que el Fiscal de Materia concluyó
sobreseyendo al accionado, corresponde determinar si dicho sobreseimiento ha sido de
conocimiento del Juez para que éste pudiera pronunciarse de una u otra manera. En ese marco,
de la revisión de la documentación que informan los antecedentes del caso, y sin considerar que
en forma posterior a la presentación de la acción de libertad fue librado el mandamiento de
libertad en virtud de lo ordenado por el Juez demandado, por Auto de 18 de enero de 2011,
corresponde puntualizar no existe evidencia que mediante memorial alguno o en acta de las
audiencias producidas, así sean éstas para determinar la suspensión de las mismas, se hubiera
dejado constancia que el accionante fue notificado con la Resolución de sobreseimiento, menos,
que el Ministerio Público hubiera puesto en conocimiento del Juez cautelar, sobre la medida de
sobreseimiento, de tal forma que, al no tener conocimiento el Juez, hasta antes de la acción de
libertad del sobreseimiento, mal podría haber dispuesto la cesación de la detención preventiva y
menos disponer la libertad del accionante.

Al respecto, debe indicarse que la jurisprudencia constitucional en reiterados casos ha


establecido que para valorar los hechos demandados requiere que el actor demuestre o acredite
con la prueba pertinente la supuesta vulneración que acusa, pues, el fallo o determinación que se
asuma debe obedecer a la certidumbre sobre si en efecto se ha violado o está amenazado los
derechos que se acusa como vulnerados. Así, la afirmación de que: “…la parte recurrente debe
acompañar la prueba suficiente y necesaria que acredite la veracidad de las acusaciones que
formula, a objeto de lograr sus pretensiones, puesto que corre por su cuenta la carga de
demostrar la existencia del o los actos lesivos que estima hayan restringido sus derechos,
puesto que no puede dictarse una resolución de procedencia cuando no se constata la
vulneración de ningún derecho o garantía fundamental precisamente por falta de pruebas en las
que el Tribunal pueda basar su decisión” (SC 0318/2004-R de 10 de marzo, entre otras).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 455


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el caso de examen no sólo que no se acompañó prueba alguna; incluso, para mayor
ilustración, fue requerido algunos actuados del cuaderno procesal. Aún así, no se constató que
las afirmaciones del accionante fueran ciertas, particularmente sobre el hecho de que el Juez de
la causa hubiera conocido sobre el sobreseimiento resuelto por el Fiscal de Materia.

Consiguientemente, el Juez de garantías al denegar la tutela, efectuó una adecuada compulsa de


los antecedentes procesales y realizó un correcto análisis de esta acción tutelar.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado, de conformidad con el
art. 12.7 de la Ley LTCP, en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0071/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad:
Expediente: 00122-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 02/12 de 8 de febrero de 2012, cursante a fs. 13 y vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad, interpuesta por René Román Laura en representación sin
mandato de Richard Quispe Fernández contra Enrique Morales Díaz, Juez Primero de
Instrucción en lo Penal de El Alto del Distrito Judicial de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante, mediante memorial de 7 de febrero de 2012, cursante a fs. 5 y vta., alegó lo


siguiente:

I.1.1. Fundamentos de hecho que motivan la acción

El accionante señala que el 3 de febrero de 2012, a horas 9:50, en inmediaciones de la av. Juan
Pablo Segundo casi esquina av. Alfonso Ugarte de la zona 16 de julio de la ciudad de El Alto,
Richard Quispe Fernández quien conducía un camión, atropelló a Cipriano Castro Maquera.
Como consecuencia del referido accidente fue detenido ese día y remitido al día siguiente, en
horas de la mañana (sábado), ante el Juez Primero de Instrucción, el mismo que justificando su
recargada labor no llevó a cabo la audiencia. Celebrada la audiencia cautelar recién el 6 del
referido mes y año a horas 10:00, dispuso como medida sustitutiva su presentación ante el Fiscal
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 456
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

dos veces al mes y una fianza económica de Bs2 000.- (dos mil bolivianos), y a pesar de haber
hecho efectivo el depósito el mismo día continúa detenido, sin expedirse el correspondiente
mandamiento de libertad.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante estima que se vulneró el derecho a la libertad de su representado.

I.1.3. Petitorio

El accionante no indica petitorio alguno.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 8 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 12
y vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la demanda

Ausente el accionante como su representado, no hubo ratificación ni ampliación de la demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Primero de Instrucción en lo Penal, mediante informe oral brindado en audiencia, señaló
que: a) En audiencia celebrada el 6 de febrero de 2012, se dispuso medidas sustitutivas a la
detención preventiva del imputado Richard Quispe Fernández, imponiéndole una fianza
económica de Bs2 000.-; b) En el mismo día a horas 17:50 el accionante presentó un memorial
adjuntando el certificado de depósito ya realizado “reclamando que quería ese rato mismo el
mandamiento de libertad” (sic), sin considerar que para providenciar el memorial el Juez tiene el
plazo de veinticuatro horas; y, c) El 7 de febrero de 2012, se providenció el memorial y se libró
el mandamiento de libertad.

I.2.3. Resolución

La Jueza Cuarta de Partido Liquidadora y de Sentencia de El Alto, por Resolución 02/12,


cursante a fs. 13 y vta, denegó la acción de libertad, señalando que: 1) La acción no señala el
derecho o la tutela que solicita; 2) De acuerdo al informe emitido por la autoridad demandada y
las fotocopias simples adjuntas, el representado del accionante se encuentra en libertad, no
pudiendo establecerse si la misma le habría sido otorgada antes o después de interpuesta la
acción, por ello y al no conocerse con precisión la tutela que se solicita resulta un impedimento
para determinar la supuesta vulneración al derecho a la libertad; y, 3) No concurren las causales
para la procedencia de la acción conforme lo previsto por los arts. 65 y 66.4 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP).

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Por memorial de 4 de febrero de 2012 (fs. 2 a 4), el Fiscal de Materia informó al Juez ahora
demandado, el inicio de investigaciones y presentó la correspondiente imputación formal contra
Richard Quispe Fernández por ser con probabilidad, autor del delito de homicidio y lesiones
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 457
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

graves y leves en accidente de tránsito acontecido el 3 de febrero de 2012, solicitando la


aplicación de medidas cautelares de carácter personal consistentes en medidas sustitutivas a la
detención preventiva de conformidad al art. 240.2 y 3 del Código de Procedimiento Penal
(CPP).

II.2. Mediante oficio 72/2012 de 6 de febrero, el Juez demandado solicitó se tenga en “calidad
de depósito” al imputado Richard Quispe Fernández hasta que cumpla con las medidas
impuestas en la audiencia de medidas cautelares (fs. 10).

II.3. El accionante mediante memorial presentado el 6 de febrero de 2012, a horas 17:50,


manifestó a la autoridad demandada que en la audiencia celebrada en horas de la mañana, se
impuso dentro de las medidas sustitutivas que debe cumplir, un depósito judicial de Bs2 000.-, el
cual fue realizado mediante depósito judicial 0148165 de 6 de febrero de 2012 a horas 12:00 (fs.
8), solicitando por ello se expida el correspondiente mandamiento de libertad (fs. 9).

II.4. El Juez Primero de Instrucción en lo Penal, libro el 7 de febrero de “2011” mandamiento de


libertad a favor de Richard Quispe Fernández (fs. 11).

II.5. El 7 de febrero de 2012 a horas 11:30, René Román Laura interpuso la presente acción a
nombre de Richard Quispe Fernández (fs. 5 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que a pesar de solicitar al Juez demandado, libre mandamiento de


libertad a favor de su representado por haber cumplido con el depósito judicial impuesto como
medida sustitutiva de su detención preventiva, su representado continua ilegalmente detenido.
Por consiguiente, corresponde en revisión, determinar si se debe otorgar o no la tutela solicitada.

III.1. Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la acción de


libertad elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a ésta acción
instituida en la Constitución Política del Estado, con relación, particularmente a los derechos a la
vida y a la libertad personal, así como a la naturaleza de la institución jurídica constitucional y el
entendimiento de la jurisprudencia constitucional, remarcando, tal como prevé la Constitución,
el enunciado normativo sobre las formas de resolución en las acciones de libertad.

III.1.1. El Derecho a la vida y a la libertad personal en la Constitución Política del Estado

Bolivia es un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, que sustenta, entre
otros valores, la dignidad y libertad de las personas, tal como indica el art. 8 de la Constitución
Política del Estado (CPE), además, en el que también en su art. 22, expresamente establece que
“La dignidad y la libertad de la persona son inviolables” y “Respetarlas y protegerlas es deber
primordial del Estado”.

Si bien estos enunciados hacen referencia a la libertad, lo hace en su acepción más general,
como expresión normativa del valor de la misma libertad, lo cual supone, para cada individuo o
colectividad, la posibilidad de actuar de forma autónoma como partícipe en la sociedad, en todos
sus ámbitos posibles y, en general, exenta de todo tipo de restricciones, salvo las establecidas en
el sistema normativo constitucional.

Dentro del sin número de libertades o derechos -según se vea- que la teoría o doctrina podría
referir, o que la norma y la jurisprudencia constitucional han establecido, se encuentra la libertad
personal, la misma que conforme precisa art. 23.I de la Ley Fundamental del, refiere que “Toda
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 458
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal” y que esta libertad personal “sólo podrá
ser restringida en los límites señalados por la ley, para asegurar el descubrimiento de la verdad
histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales”, luego entonces, la libertad de la
persona es aquél derecho fundamental y constitucional que no solo que debe ser respetado sino
debe ser protegido por el Estado.

Por cierto, con el salvamento del numeral IV del citado Artículo 23 de la CPE, en el sentido que
toda persona que sea encontrada en delito flagrante podrá ser aprehendida por cualquier otra
persona, aun sin mandamiento, con el único objeto de que sea conducido ante autoridad
competente; de conformidad al numeral III del señalado Artículo: “Nadie podrá ser detenido,
aprehendido o privado de su libertad, salvo en los casos y según las formas establecidas por la
ley” y que “La ejecución del mandamiento requerirá que éste emane de autoridad competente y
que sea emitido por escrito”.

En otro orden, el art 15.I de la CPE, consagra que “Toda persona tiene derecho a la vida y a la
integridad física, psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos crueles, inhumanos,
degradantes o humillantes…”. Así, la Constitución Política del Estado, al tiempo de señalar en
el art 14.I, que los derechos reconocidos por ella, entre otros caracteres, son inviolables,
establece que el Estado tiene el deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos.

III.1.2. De la acción de libertad

La Constitución Política del Estado, en la Sección I, del Capítulo Segundo (Acciones de


Defensa) del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte
(Bases fundamentales del Estado - Derechos, deberes y Garantías) ha instituido la acción de
libertad. En ese marco, el art. 125 establece: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

El art. 65 de la Ley, del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), al referirse al objeto de


de la acción de libertad, señala lo siguiente: “Es una acción constitucional extraordinaria de
tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión”;

La acción de libertad, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que la Ley


Suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección inmediata tanto
del derecho a la vida así como de aquellas situaciones en las que el derecho a la libertad física de
las personas se encuentra lesionada por causa de una ilegal persecución, indebido procesamiento
o indebida privación de libertad; en este último caso, siempre que el ordenamiento jurídico
ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para reparar la lesión producida, pues, de existir
dicho medio, deberá hacerse uso de éste.

Desde otra perspectiva, para la consideración y resolución de la acción de libertad, debe tenerse
en cuenta que los ámbitos de protección se diferencian por el derecho que protegen: 1) derecho a
la vida; 2) derecho de locomoción, en tanto esté amenazado el derecho a la libertad personal; 3)
derecho al debido proceso, en cuanto esté restringido el derecho a la libertad personal y 4)

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 459


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derecho a la libertad personal, por haberse privado al margen de la Constitución Política del
Estado y la ley.

III.1.3. Sobre las formas de resolución de las acciones de libertad

La acción de libertad tiene por objeto determinar si la vida de una persona está en peligro y, en
cuanto a la libertad personal se refiere, si la persona esta indebidamente privada de libertad o,
está siendo ilegalmente perseguida o indebidamente procesada; en estos dos últimos casos,
cuando la persecución o procesamiento está vinculado a la restricción del derecho a la libertad
personal.

Según se presenten los hechos y dilucide el ámbito de protección cuya tutela se demanda, así
también, la resolución que emita el juez o tribunal llamado a conocer la acción de libertad,
determinará lo que corresponda. Así, el art 125 de la CPE, nos señala que la persona que
considere que su vida está en peligro, solicitará que se guarde tutela a su vida; la que crea estar
ilegalmente perseguida, que cese la persecución indebida o la que cree estar indebidamente
procesada o privada de libertad personal, se restablezcan las formalidades legales o se restituya
su derecho a la libertad. Dicho de otro modo, en la acción de libertad, al margen de los casos en
los que se tutela el derecho a la vida o de locomoción (por persecución ilegal en la que esté en
riesgo el derecho a la libertad física de la persona), el juez competente, o puede disponer la
restitución de la libertad o mandar a que se reestablezcan las formalidades, particularmente
cuando de las lesiones al debido proceso en tanto éstas estén relacionadas con el derecho a la
libertad física de las personas.

III.2. Sobre el principio de celeridad en la administración de justicia

El art. 178.I de CPE, establece que: “La potestad de impartir justicia emana del pueblo boliviano
y se sustenta en los principios de independencia, imparcialidad, seguridad jurídica, publicidad,
probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo jurídico…”

En concordancia con la mencionada norma constitucional, el art. 115.II de la citada Ley


Fundamental que determina: “El Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a
una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones”, de lo que se
establece que la administración de justicia debe ser rápida y eficaz tanto en la tramitación como
en la resolución de las causas, ya que las personas que intervienen en el proceso esperan una
definición oportuna de su situación jurídica, máxime si está comprometido un derecho
fundamental de primer orden como es el de la libertad. (Las negrillas son nuestras)

La jurisprudencia constitucional al referirse al principio de celeridad y con relación a los


administradores de justicia, estableció que este principio: “…impone a quien administra justicia
el deber jurídico de despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones
indebidas; exigencia que se hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad
personal, toda vez que tales peticiones deben ser atendidas de forma inmediata si no existe una
norma que establezca un plazo, y si existiera, el plazo deberá ser cumplido estrictamente”. Así,
las SSCC 0758/2000-R-, 1070/2001-R y 0105/2003-R entre otras.

En el orden normativo, el art. 3.7 de la Ley del Órgano Judicial (LOJ), determina que la
celeridad “comprende el ejercicio oportuno y sin dilaciones en la administración de justicia”.

III.3. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 460


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el caso de autos se concluye que dentro del proceso penal instaurado contra Richard Quispe
Fernández por la presunta comisión del delito de homicidio y lesiones graves y leves en
accidente de tránsito donde el juez demandado, fue informado del inicio de las investigaciones el
sábado 4 de febrero de 2012, conforme consta en el cargo de recepción de la imputación fiscal
presentada por el Fiscal Edgar Alarcón Laural cursante de fs. 2 a 4 de obrados, así como del
memorial de la demanda (fs. 5). La autoridad demandada debiendo por ello dar cumplimiento a
lo establecido por el art. 226 del CPP, puesto que tenía el plazo máximo de veinticuatro horas
para resolver la aplicación de alguna medida cautelar más aún tenía el deber de tramitarla con la
debida celeridad.

Sobre el tema la jurisprudencia constitucional, estableció en la SC 1121/2011-R de 19 de agosto,


entre otras que: “Este Tribunal a momento de arribar a un entendimiento respecto a la forma de
actuar de toda autoridad jurisdiccional que tome conocimiento de una solicitud realizada por
una persona privada de libertad establece: 'que toda autoridad que conozca de una solicitud
en la que se encuentre involucrado el derecho a la libertad física, tiene el deber de tramitarla
con la mayor celeridad posible, o cuando menos dentro de los plazos razonables, pues de no
hacerlo podría provocar una restricción indebida del citado derecho…" (las negrillas son
nuestras).

En consecuencia, es evidente que el juez demandado, no cumplió con el plazo previsto por el art.
226 del CPP, puesto que si bien la autoridad demandada fijó audiencia para el domingo 5 de
febrero de 2012, la misma se suspendió alegando que “en ese momento se estaba realizando una
audiencia” (fs. 12 a 13 vta.). En tal sentido, celebró la audiencia de consideración de medidas
cautelares fuera del plazo de veinticuatro horas, no siendo válido ningún justificativo. Por otra
parte, no puede dejar de considerarse el hecho de que a pesar de llevarse a cabo la audiencia el
día lunes 6 de febrero y haberse señalado como medidas sustitutivas previstas en el art. 240.2 y
6 del CPP, consistentes en la presentación ante el Fiscal dos veces por mes y una fianza
económica de Bs2 000.-, depósito que fue realizado en el día. La autoridad demandada no
resolvió de manera inmediata la solicitud de mandamiento de libertad, en el entendido que bajo
su conocimiento estaba detenido el imputado desde el día viernes 3 de febrero de 2012, a la
espera de la resolución de las medidas cautelares y su cumplimiento.

Finalmente, es evidente que el juez demandado ocasionó dilación injusta o indebida, provocando
una detención ilegal al haber suspendido injustificadamente la audiencia del 5 de febrero,
omitiendo el deber de tramitarla con la debida celeridad o por lo menos dentro de los plazos,
ocasionando con ello la afectación al derecho a la libertad del representado del accionante, quien
como consecuencia de la conducta dilatoria de la autoridad demandada estuvo detenido desde el
viernes 3 de febrero hasta el día martes 7 de febrero de 2012, en la cual recién se libró el
mandamiento de libertad.

En consecuencia la Jueza de garantías, al denegar la acción tutelar, no evaluó correctamente los


datos del proceso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado y el art. 12.7 de la

Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución


02/12 de 8 de febrero de 2012, cursante a fs. 13 y vta., emitida por la Jueza Cuarta de Partido
Liquidadora y de Sentencia de El Alto; y, en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 461


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque CapumaMagistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0075/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad
Expediente: 00041- 2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 27 de enero de 2012, cursante de fs. 283 a fs. 287 vta.,
pronunciada, dentro de la acción de libertad, interpuesta por María Victoria Calderón
Gonzales, contra Marco Antonio Fajardo Montaño, Juez Tercero del Trabajo y Seguridad
Social del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 26 de enero de 2012, cursante de fs. 182 a 188 vta., la accionante
expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Refiere que el 19 de diciembre de 2011, fue detenida en la ciudad de La Paz y conducida hasta
el Penal de San Sebastián mujeres de la ciudad de Cochabamba, debido a un mandamiento de
apremio emitido por el Juez Tercero de Partido del Trabajo y Seguridad Social, quien conoció el
proceso interpuesto por Franz Grover de la Zerda Morales, por concepto de beneficios sociales,
salarios devengados y otros, contra Antonio Chiquie Dippo y Norma Deissy Flores Zabalaga, en
su condición de representantes legales del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB) S.A., quienes
asumieron defensa hasta la ejecución de la sentencia. Estando ejecutoriado el proceso mediante
Auto Supremo 332 de 28 de julio de 2010, se elaboró la liquidación de beneficios sociales,
según Auto de 27 de octubre de ese año.

Manifiesta que, el Juez demandado por Auto de 27 de agosto de 2011, la conminó a cancelar en
ejecución de fallos pasados en autoridad de cosa juzgada, la suma de Bs 2'139.640,12.- (dos
millones, ciento treinta y nueve mil seiscientos cuarenta con 12/100 bolivianos), por concepto de
beneficios sociales a favor del demandante, resolución con la que fue notificada por cedula en
oficinas del LAB. S.A. Por otro lado, señala que los poderes conferidos le otorgan facultades de
representación; empero, no le delegan la representación legal de la empresa, calidad
erróneamente otorgada por el Juez demandado. El mandamiento de apremio se libró en base a
una certificación emitida por el Registro Obligatorio de Empleadores, expedida a solicitud del
mismo Juez.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 462


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Añade que en su calidad de Gerente General de la empresa LAB S.A. realizó oferta de pago y
sustitución de medida precautoria, ofreciendo en garantía para el cumplimiento de pago del
monto adeudado, un motor de una turbina de avión, negado mediante Resolución de 19 de enero
de 2012; determinación contraria a lo previsto por los arts. 105 y 106 del Código Procesal del
Trabajo (CPT).

Finalmente manifiesta que, canceló el monto de Bs100.000.- (cien mil con 00/100 bolivianos),
con el fin de sustituir el mandamiento de apremio ordenado en su contra y por encontrarse
detenida por más de cuarenta días; empero, no surtió efecto alguno, a cuya consecuencia su
salud está deteriorada.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante denuncia la vulneración de sus derechos a la libertad personal, a la vida y a la


salud, sin citar al efecto los artículos pertinentes de la Constitución Política del Estado.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, se deje sin efecto el Auto de 29 de septiembre de 2011, que dispuso
la emisión del mandamiento de apremio en su contra; se restituya su derecho a la libertad y la
libre locomoción.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

El 27 de enero de 2012, en audiencia pública y en presencia de la accionante acompañada de su


abogada, el Juez demandado Marco Antonio Fajardo Montaño y la representante del Ministerio
Público; como consta en el acta cursante de fs. 283 a 284 de obrados, se produjeron los
siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La abogada de la accionante en audiencia ratificó en su integridad los fundamentos del memorial


de demanda y los amplió, señalando: a) En la fecha, hizo uso del recurso de apelación; b) El
principio de subsidiariedad tiene su excepción, cuando está en riesgo la vida; y, c) Durante los
primeros días posteriores a la ejecución del mandamiento de apremio, planteó una primera
acción de libertad, denegada por el Juez de garantías, por haberse demandado la tutela del
debido proceso; sin embargo, ordena se precautele el derecho a su salud, a ese fin es asistida por
el médico del Régimen Penitenciario, quien emitió un certificado de su estado de salud, toda vez
que cuenta con 71 años de edad.

En uso de la réplica la abogada de la accionante manifestó, que su defendida se apersonó ante el


Registro Obligatorio de Empleadores en calidad de empleadora, no así de representante legal,
porque nunca tuvo tal calidad.

I.2.2.Informe de la autoridad demandada

Marco Antonio Fajardo Montaño, Juez Tercero del Trabajo y Seguridad Social, presentó
informe escrito cursante a fs. 211 y vta. y en audiencia lo amplió, indicando: 1) Dentro del
proceso laboral tramitado en su Juzgado, contra el LAB S.A., empresa representada por María
Victoria Calderón Gonzales, en el proceso de ejecución de Sentencia, por memorial de 20 de
diciembre del año 2011, la accionante, inicialmente planteo acción de libertad aduciendo ser
Gerente General del LAB S.A., habiendo radicado en el Juzgado Cuarto de Sentencia a cargo de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 463
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

José Pompilio Coca Sejas, en esta fase se emitió la Resolución de 23 de diciembre de 2011,
denegando la acción de libertad, elevada al Tribunal Constitucional para su revisión y
encontrándose pendiente de resolución, lo cual no permite ni siquiera ingresar al fondo del
asunto, por cuanto esta última se trata de una nueva acción constitucional con identidad de
sujeto, objeto y causa y contra los actos consentidos libre y expresamente por la demandada en
el proceso laboral; 2) Además, la accionante alegó no ser representante legal de la empresa
demandada, en plena contradicción con el formulario de registro de empleador, declaración
jurada prestada por la accionante donde figura como representante legal de LAB S.A., con este
motivo y bajo responsabilidad patronal la aludida representante consintió inclusive un pago de
Bs100.000.-, a favor del actor como anticipo de los beneficios sociales adeudados en el proceso
señalado. Asimismo, mediante certificación emitida por el Ministerio de Trabajo de 25 de julio
de 2011, resultó ser representante legal de dicha empresa, por estar consignado como tal en el
Registro Obligatorio de Empleadores y, 3) En ejecución de fallos pasados en autoridad de cosa
juzgada se conminó al pago de los beneficios sociales, y ante su incumplimiento se expidió
mandamiento de apremio conforme a los arts. 213 y 216 del CPT, amparado también en el 12 de
la Ley de Abolición de Prisión y Apremio Corporal (LAPACOP), como medida compulsiva en
resguardo del derecho a la eficacia de las resoluciones judiciales.

I.2.3. Intervención del Ministerio Publico

En audiencia la representante del Ministerio Publico, manifestó: i) La acción de libertad se


planteó con el argumento de que la accionante estaría ilegalmente detenida vulnerándose sus
derechos a la libertad y a la salud, y encontrarse indebidamente perseguida a través de un “auto”
donde se dispone mandamiento de apremio en su condición de Gerente General del LAB S.A.;
ii) Al respecto, el art. 4 del CPT, establece que el juez tiene una función activa dentro el proceso
y puede realizar cualquier diligencia necesaria sin que la parte previamente lo pida; iii) En el
caso presente, existiendo sentencia ejecutoriada, la misma tiene que cumplirse, conforme lo
establecen los arts. 213 y 216 del CPT, normas legales que posibilitan la expedición de
mandamiento de apremio, cuando los beneficios sociales no son pagados; iv) Cuando se
encontraba aprehendida María Victoria Calderón Gonzales, estaba en negociaciones con el
demandante; v) La norma laboral no establece que en ejecución de Sentencia se puedan hacer
ofertas de pago y, vi) Con esos argumentos pidió se deniegue la tutela solicitada; empero, deberá
precautelarse por su estado de salud.

I.2.4. Resolución

Concluida la audiencia, Rosario Saiz Quiroga, Jueza Tercera de Sentencia Penal del Tribunal
Departamental de Justicia de Cochabamba, constituida en Jueza de garantías, mediante
Resolución de 27 de enero de 2012, cursante de fs. 284 a 287 vta., “denegó” la tutela, con los
siguientes fundamentos: a) Existe identidad de sujetos, objeto y causa en que se fundamentó la
demanda de una acción de libertad con relación a otra presentada en una anterior oportunidad.
Por cuanto, la jurisdicción constitucional está impedida de pronunciarse sobre el fondo de la
segunda acción, pues lo contrario significaría incurrir en duplicidad de fallos respecto a un
mismo asunto; y, b) Asimismo, señala que existe un recurso planteado por la accionante,
cuestionando actuaciones jurisdiccionales de la autoridad demandada, los mismos que deben ser
agotados previamente antes de acudir a la jurisdicción constitucional.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Remitido el expediente ante este Tribunal y producido el respectivo sorteo, de conformidad a ley,
por Auto Constitucional 013-A/2012-CA/S de 28 de febrero, se dispuso requerir al Juez Tercero de
Trabajo y Seguridad Social del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, la remisión de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 464
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

documentación complementaria, así como la suspensión del plazo para la emisión de la presente
resolución (fs. 31 y 32), habiéndose reanudado éste, por decreto de 28 de marzo de 2012 (fs. 61).

Se aclara que el número 2012-25047-02-AL con el que figuraba el presente expediente ha sido
reasignado con el número de expediente 0041-2012-01-AL, por haberse dispuesto por el Pleno del
Tribunal Constitucional Plurinacional, nueva numeración.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. En proceso laboral, seguido por Franz Grover de la Zerda Morales contra la empresa LAB
S.A., representada por Antonio Chiquie Dippo y Norma Deissy Flores Zabalaga, Presidente del
Directorio y Directora Secretaria, por pago de beneficios sociales y salarios devengados,
mediante Sentencia de 16 de julio de 2007, el Juez Tercero del Trabajo y Seguridad Social,
declaró probada la demanda (fs. 15 a 18). Confirmada en parte por Auto de Vista 238/2008 de 7
de agosto (fs. 19 a 20 vta.).

II.2. A fs. 48, cursa la certificación de 25 de julio de 2011, emitida por la Jefatura
Departamental de Trabajo de Cochabamba, donde en cumplimiento a la orden judicial del Juez
Tercero del Trabajo y Seguridad Social, se establece que María Victoria Calderón Gonzales con
CI. 104029 LP, figura como representante legal de la empresa LAB. S.A., conforme los archivos
y Registro Obligatorio de Empleador.

II.3. A fs. 49, cursa Auto de 27 de agosto de 2011, emitido por el Juez Tercero del Trabajo y
Seguridad Social, que se conmina a María Victoria Calderón Gonzales, en su calidad de
representante legal de la empresa LAB S.A., a cancelar la suma adeudada de Bs2.139.640,12.-,
por concepto de beneficios sociales al demandante. Resolución notificada a la accionante,
mediante cédula el 21 de septiembre de ese año (fs. 341).

II.4. En fs. 52, cursa el Auto de 29 de septiembre de 2011, pronunciado por el Juez demandado,
se dispuso la expedición del correspondiente mandamiento de apremio, contra la accionante,
hasta que cancele la suma adeudada, por concepto de beneficios sociales. El mandamiento se
expidió el 29 de octubre de 2011 (fs. 54).

II.5. Por memorial presentado el 11 de noviembre de 2011, la accionante solicitó al Juez Tercero
del Trabajo y Seguridad Social, la revocatoria del mandamiento de apremio (fs. 355 a 356 vta.)
No consta en obrados que dicha solicitud hubiere sido resuelta.

De fs. 79 a 81, cursa memorial de 27 de diciembre de 2011, presentado por María Victoria
Calderón Gonzales, solicitando en la vía incidental se la excluya del proceso, dado que no es
representante legal del LAB S.A. y se deje sin efecto la “detención preventiva” que cumple en el
Penal de San Sebastián mujeres de la ciudad de Cochabamba. Corrida en traslado según decreto
de 28 de ese mes y año (fs. 82). No consta en obrados la resolución del mismo.

II.6. Por memorial de 17 de enero de 2012, la accionante se apersonó ante el Juez Segundo de
Ejecución Penal, denunciando maltrato y vulneración a sus derechos humanos y solicitó la
aplicación de la detención domiciliaria a su favor; denegada por Auto de la misma fecha (fs. 124
a 126 vta.).

II.7. Según acuerdo de pago de beneficios sociales de 30 de diciembre de 2011, suscrito entre
María Victoria Calderón Gonzales, en representación de LAB S.A., Franz Grover de la Zerda
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 465
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Morales, Carlos Alberto Caballero Guzmán y Alfredo Romero Gómez, por el cual acordaron el
pago de los beneficios sociales adeudados por la indicada empresa, obligándose la accionante
como representante legal, a un plan de pagos. Documento reconocido en sus firmas el 31 de
enero de 2012, ante Notario de Fe Pública (fs. 410 a 412).

II.8. En informe de 27 de marzo de 2012, la autoridad demandada, indicó que producto de la


suscripción del acuerdo de pago de beneficios sociales, la accionante se encuentra en libertad
(fs. 421 a 422).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia encontrarse ilegalmente perseguida e indebidamente procesada; la


vulneración de sus derechos a la libertad física, libre locomoción, a la vida, y a la salud; por
cuanto, el Juez Tercero del Trabajo y Seguridad Social, en proceso laboral por cobro de
beneficios sociales y otros, seguido contra los representantes legales del LAB S.A., libró
mandamiento de apremio en su contra, sin considerar que no ostenta dicha condición, sino la de
Gerente General sin facultad de representación; además, de no haberse considerado su edad y
condición de salud, poniéndola en riesgo y por ende su vida. Por consiguiente, corresponde
analizar en revisión, si los hechos denunciados son evidentes y en el caso concreto, si la
autoridad demandada vulneró los derechos de la accionante, con la finalidad de conceder o no la
tutela reconocida por este medio de defensa.

III.1. Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la acción de


libertad elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a la acción de
libertad instituida en la Constitución Política del Estado, con relación, particularmente a los
derechos a la vida y a la libertad personal, así como a la naturaleza de la institución jurídica
constitucional y el entendimiento de la jurisprudencia constitucional, remarcando, tal como
prevé la Ley Fundamental, el enunciado normativo sobre las formas de resolución en las
acciones de libertad.

III.1.1. El Derecho a la vida y a la libertad personal en la Constitución Política del Estado

Bolivia es un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, que sustenta, entre
otros valores, la dignidad y libertad de las personas, tal como establece el art.8 de la
Constitución Política del Estado (CPE); que, además, en el art.22, expresamente establece que
“La dignidad y la libertad de la persona son inviolables” y “Respetarlas y protegerlas es deber
primordial del Estado”.

Si bien estos enunciados hacen referencia a la “Libertad”, lo hace en su acepción más general,
como expresión normativa del valor libertad, lo cual supone, para cada individuo o colectividad,
la posibilidad de actuar de forma autónoma como partícipe en la sociedad, en todos sus ámbitos
posibles y, en general, exenta de todo tipo de restricciones, salvo las establecidas en el sistema
normativo constitucional.

Dentro del sin número de libertades o derechos -según se vea- que la teoría o doctrina podría
referir, o que la norma y la jurisprudencia constitucional han establecido, se encuentra la libertad
personal, la misma que conforme precisa en el art.23.I de la Ley suprema del ordenamiento
jurídico, refiere que “Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal” y que esta
libertad personal “sólo podrá ser restringida en los límites señalados por la ley, para asegurar el
descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales”, luego
entonces, la libertad de la persona es aquél derecho fundamental y constitucional que no solo
debe ser respetado sino debe ser protegido por el Estado.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 466
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por cierto, con el salvamento del art. 23.IV de la CPE, en el sentido que toda persona que sea
encontrada en delito flagrante podrá ser aprehendida por cualquier otra persona, aun sin
mandamiento, con el único objeto de que sea conducido ante autoridad competente; de
conformidad al numeral III del señalado artículo: “Nadie podrá ser detenido, aprehendido o
privado de su libertad, salvo en los casos y según las formas establecidas por la ley” y que “La
ejecución del mandamiento requerirá que éste emane de autoridad competente y que sea emitido
por escrito”.

En otro orden, el art.15.I de la CPE, consagra que “Toda persona tiene derecho a la vida y a la
integridad física, psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos crueles, inhumanos,
degradantes o humillantes (…)”. Así, el art.14.I de la CPE, al tiempo de señalar, que los
derechos reconocidos por ella, entre otros caracteres, son inviolables, establece que el Estado
tiene el deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos.

III.1.2. De la acción de libertad

La Constitución Política del Estado, en la Sección I, del Capítulo segundo (Acciones de


Defensa) del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte
(Bases fundamentales del Estado - Derechos, deberes y Garantías) ha instituido la acción de
libertad. En ese marco, en su art.125 establece: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

El art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional ( LTCP), al referirse al objeto de la


Acción de libertad, señala lo siguiente: “Es una acción constitucional extraordinaria de
tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión”.

La acción de libertad, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que la Ley


Fundamental establece un procedimiento de protección inmediata tanto del derecho a la vida así
como de aquellas situaciones en las que el derecho a la libertad física de las personas se
encuentra lesionada por causa de una ilegal persecución, indebido procesamiento o indebida
privación de libertad; en este último caso, siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no
prevea un medio idóneo y expedito para reparar la lesión producida, pues, de existir dicho
medio, deberá hacerse uso de ese.

Desde otra perspectiva, para la consideración y resolución de la acción de libertad, debe tenerse
en cuenta que los ámbitos de protección se diferencian por el derecho que protegen: 1) Derecho
a la vida; 2) Derecho de locomoción, en tanto esté amenazado el derecho a la libertad personal;
3) Derecho al debido proceso, en cuanto esté restringido el derecho a la libertad personal y 4)
Derecho a la libertad personal, por haberse privado al margen de la Constitución y la Ley.

III.1.3. Sobre las formas de resolución de las acciones de libertad

La acción de libertad tiene por objeto determinar si la vida de una persona está en peligro y, en
cuanto a la libertad personal se refiere, si la persona esta indebidamente privada de libertad o,
está siendo ilegalmente perseguida o indebidamente procesada; en estos dos últimos casos,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 467
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cuando la persecución o procesamiento está vinculado a la restricción del derecho a la libertad


personal.

Según se presenten los hechos y dilucide el ámbito de protección cuya tutela se demanda, así
también, la resolución que emita el Juez o Tribunal llamado a conocer la acción de libertad,
determinará lo que corresponda. Así, el art.125 de la CPE nos señala que la persona que
considere que su vida está en peligro, solicitará que se guarde tutela a su vida; la que crea estar
ilegalmente perseguida, que cese la persecución indebida o la que cree estar indebidamente
procesada o privada de libertad personal, se restablezcan las formalidades legales o se restituya
su derecho a la libertad. Dicho de otro modo, en la acción de libertad, al margen de los casos en
los que se tutela el derecho a la vida o de locomoción (por persecución ilegal en la que esté en
riesgo el derecho a la libertad física de la persona), el juez competente, o puede disponer la
restitución de la libertad o mandar a que se reestablezcan las formalidades, particularmente
cuando de las lesiones al debido proceso en tanto éstas estén relacionadas con el derecho a la
libertad física de las personas.

III.2. Sobre el procesamiento indebido

El procesamiento ilegal o indebido, es la acción por la que un juez o autoridad administrativa, a


tiempo de sustanciar un proceso penal o interno, lesiona la garantía constitucional del debido
proceso, exige el mismo que las personas tengan el beneficio a un proceso justo, equitativo, e
imparcial y que sus derechos se acomoden a lo establecido por las disposiciones jurídicas
generales aplicables a todos aquellos que se hallen en una situación similar. De lo que se deduce
que el procesamiento ilegal e indebido se produce por la infracción de las disposiciones legales
procesales y formalidades establecidas por ley.

En ese contexto, con relación al procesamiento indebido, este Tribunal, estableció: “Las
vulneraciones al debido proceso y la tutela a través de esta garantía jurisdiccional, se precisó
en las SSCC 0451/2010-R de 28 de junio, reiterada por la 0033/2011-R de 7 de febrero: 'La
Constitución Política del Estado (arts. 115.II y 117.I), reconoce al debido proceso como un
instrumento de sujeción a las reglas del ordenamiento jurídico, en el cual se debe enmarcar la
actuación de las partes procesales, la finalidad de este derecho constitucional y garantía
jurisdiccional es proteger a los ciudadanos de posibles abusos de las autoridades, que se
originen en actuaciones u omisiones procesales o en decisiones que adopten y de las cuales
emerja la lesión a sus derechos y garantías, como elementos del debido proceso. Cuando se
denuncie su vulneración en cualquiera de sus componentes, corresponderá su impugnación a
través de la acción de libertad, cuando esté directamente relacionada con la restricción de la
libertad del accionante y se constate la existencia de absoluto estado de indefensión; caso
contrario, la denuncia por irregularidades cometidas en el proceso (entendidas como violación
al debido proceso), deberán ser reclamadas a través de los medios ordinarios que el
ordenamiento jurídico procesal penal prevé, agotada la jurisdicción ordinaria y en el supuesto
de persistir la lesión, se activa la tutela de la acción de amparo constitucional” (SC 0378/2011-
R de 7 de abril).

III.3. Mandamiento de apremio en materia laboral

El art. 213 del CPT, establece que: “Las sentencias ejecutoriadas se harán cumplir por el Juez de
primera instancia, que concederá a la parte perdidosa un plazo de tres días para el efecto”; por su
parte el art. 216 del CPT, dispone: "Si transcurridos los tres días para la ejecución de la
sentencia, el litigante perdidoso no cumple su obligación, el Juez librará mandamiento de
apremio del ejecutado”. Es decir, que para que proceda el apremio corporal en materia laboral,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 468


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

necesariamente deberán cumplirse las condiciones establecidas en los preceptos legales


aludidos.

Sobre el tema la SC 0667/2011-R de 16 de mayo, citando a su vez a la SC 0085/2010-R de 3 de


mayo, señaló lo siguiente: “…la Ley de Abolición de Prisión y Apremio Corporal por
Obligaciones Patrimoniales, ha reiterado como causal de restricción excepcional al derecho a
la libertad física de la persona el incumplimiento de obligaciones en materia laboral o de
seguridad social. Es así que los arts. 11 y 12 de la citada Ley, disponen que el apremio
corporal se mantiene y aplica en materia de asistencia familiar y también es aplicable en
materia laboral y seguridad social. Sin embargo, la garantía normativa consagrada por el art.
9.I de la CPEabrg, ahora art. 23.I de la CPE, establece las condiciones de validez legal para la
aplicación de la medida restrictiva al ejercicio del derecho a la libertad física, por cuanto no
es suficiente que esté previsto en la ley la aplicación de la medida, sino que además se requiere
que sea intimada por escrito por la autoridad competente y se expida un mandamiento previo
cumplimiento de los requisitos, formalidades y condiciones previstas en el ordenamiento
jurídico”.

Este Tribunal, mediante su jurisprudencia se pronunció sobre a las condiciones previas que
necesariamente deberán cumplirse antes de procederse al apremio corporal en materia laboral,
indicando al respecto en la SC 1002/2011-R, entre otras, que: “…en ejecución de sentencia el
litigante perdidoso debe ser notificado con la conminatoria previamente al cumplimiento de la
obligación en el término que le fija, vencido el cual y al no hacer efectiva la misma se dispone
su apremio'; señalando: '(…) el art. 137.I inc. 5) y II del CPC que establece: 'cuando se trate de
resoluciones que contuvieren conminatorias, se harán por cédula en los domicilios señalados
por las partes para los efectos del proceso, a menos de que ellas hubieren sido notificadas
personalmente' (…)”.

En cuanto al apremio en ejecución de fallos al tratarse de representantes legales, la ya


mencionada SC 1002/2011-R, estableció: “Cabe señalar que este Tribunal refiriéndose al
apremio contra los representantes legales de las empresas demandadas por el pago de
beneficios sociales, a través de la SC 0085/2010-R de 3 de mayo, ha dejado establecido que: 'El
art. 110 del CPT, señala que toda empresa tendrá un representante, quien se apersona e
interviene en el proceso laboral interpuesto por los empleados o trabajadores, en el entendido
de ser la persona jurídica demandada y contra quien en ejecución de fallos se conminará al
pago de los beneficios sociales determinados y en caso de incumplimiento se ordenará la
medida restrictiva de libertad, que se materializa al librar el mandamiento de apremio en su
contra (…), por lo cual para no asumir una responsabilidad que no le corresponde, la calidad
de representante legal debe ser demostrada…”.(las negrillas nos pertenecen).

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso que se analiza, la accionante considera que se encuentra indebidamente procesada,


por cuanto la autoridad demandada emitió conminatoria mediante Auto de 27 de agosto de 2011,
ante una certificación emitida por el Registro Obligatorio de Empleadores de 25 de julio de
2011, exigiéndole el pago de obligaciones laborales, notificación efectuada mediante cédula en
la oficina de la empresa señalada el 19 de octubre de 2011; empero, la accionante aduce no
haber intervenido en el proceso y que tampoco fue citada en la forma debida para que intervenga
en la causa como personera legal del LAB S.A.; ante el incumplimiento en el pago, dio lugar a la
emisión del mandamiento de apremio en su contra, el mismo que fue ejecutado el 19 de
diciembre del año 2011.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 469


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En ese presupuesto se tiene que conforme se ha señalado en el Fundamento Jurídico III.3 de la


presente Sentencia Constitucional, los presupuestos procesales dentro del trámite del cual
emerge el mandamiento de apremio contra la accionante, ha observado las formalidades de ley.

Por otra parte, resulta absolutamente evidente que en el caso en análisis y del cual emerge el
mandamiento de apremio por obligaciones sociales, la accionante ha ejercido en todo momento
el derecho pleno e irrestricto a la defensa, en ese sentido se tiene también sentado que no ha
existido estado de indefensión en la accionante -Conclusiones II.5 y II.6 de este fallo-, en esos
presupuestos, es evidente que la accionante no cumplió con los presupuestos sentados por éste
Tribunal y que fueron ampliamente desarrollados en el Fundamento Jurídico III.3 de la presente
Sentencia Constitucional, requisitos esenciales para abrir la competencia y conocimiento de la
acción de defensa intentada bajo el fundamento de que existiría una amenaza cierta a la libertad
y a la libre locomoción como emergencia de un ilegal procesamiento. Dicho de otro modo, no
concurriendo de forma simultánea los dos presupuestos para la activación de la protección que
brinda esta garantía jurisdiccional, cuando se alegue procesamiento indebido, no es posible
ingresar al análisis de fondo del problema jurídico planteado; dado que, aún cuando existiera la
relación directa entre la presunta lesión al debido proceso y el derecho a la libertad; empero, se
advierte que no existió absoluto estado de indefensión que hubiere impedido que el agraviado
(a) ejerza mecanismos ordinarios de defensa, constituye un impedimento para el examen de la
problemática, en el entendido que es requisito inexcusable la concurrencia simultánea y no
aislada de ambos presupuestos.

Bajo ese contexto, corresponde que las presuntas lesiones al debido proceso, alegadas en la
presente acción, deberán ser reclamadas a través de las vías ordinarias que correspondan,
agotadas las mismas y sólo ante la persistencia de la lesión, se activa la protección de la acción
de amparo constitucional, como acción o medio de defensa idóneo para impugnar lesiones al
debido proceso.

Resuelta la problemática planteada, corresponde hacer referencia, que de acuerdo a la


documentación complementaria remitida a este Tribunal y lo informado por la autoridad
demandada, la accionante se encuentra en libertad debido a que, en su condición de
representante legal de la empresa LAB S.A., suscribió un acuerdo de pago de beneficios sociales
con los demandantes en el proceso laboral seguido en su contra -Conclusiones II.7 y II.8 de este
fallo-.

Consecuentemente, se concluye que la Jueza de garantías, al haber denegado la tutela, aunque


con otros argumentos, evaluó correctamente los datos del proceso.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, y con el art. 12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela, con la
aclaración que no se ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 470


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0076/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional:
Expediente: 00042-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 001/2012 de 26 de enero, cursante de fs. 484 a 489, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Cynthia Cayo Ríos contra
Jaime Enrique de Ugarte Lazcano, Orlando Stuardo Jordán Quiroga, José Ángel
Valenzuela Solíz, Mauricio Antonio Torrico Saavedra, Carlos Zenteno Heredia, Franz
Gonzales Zurita, Rolando Ramos Gutiérrez, Carlos Salas Pinto y José Luis Tapia Rojas,
miembros del consejo de administración de la Cooperativa Mixta de Telecomunicaciones
Cochabamba (COMTECO LTDA); Dalsy Montaño Rivera, Alexander Sassha Torrico
Tumaev, Luis Fernando Murguía Rowe, Nelva del Carmen Garnica Numbela y Álvaro
Fernando Gamboa Afcha, miembros de la Comisión Mixta de proceso interno de la misma
entidad.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 4 de enero de 2012, cursante de fs. 115 a 121, y ampliación de 5
del mismo mes y año, cursante de fs. 126 a 127, la accionante expone los siguientes
fundamentos de hecho y derecho.

I.1.1. Hechos que la motivan la acción

1.- Desde el 17 de mayo de 2004, trabajó en COMTECO LTDA, siendo designada en el cargo
de Responsable de Telemarketing en noviembre de 2007; empero, el 23 de mayo de 2011, se le
inició proceso interno, según instrucción de la Gerencia General, por la presunta existencia de
irregularidades según auditoria de pagos; por cuanto, fue suspendida de sus funciones sin goce
de haberes, sin considerar su condición de madre progenitora de un recién nacido menor de un
año, nacido el 8 de abril de igual año. Pese a contar con todas las pruebas para demostrar la
inexistencia de causal alguna que motive un proceso interno, menos un despido “justificado”, se
sometió al proceso, a pesar de conocer sus derechos como madre trabajadora.

Agrega, que el proceso se inició “a sus espaldas” mientras estaba gozando de su descanso como
madre de recién nacido; por cuanto, el procedimiento y la Resolución, son ilegales, nulos e
inconstitucionales.

2.- Al finalizar el proceso interno, por Resolución C.A. 03/2011 de 3 de agosto, fue despedida
por haberse enmarcado dentro de las causales de despido justificado según el art. 9 incs. a), e) y
g) del Reglamento de la Ley General del Trabajo determinándose el inicio de procesos penales
en su contra. En apelación, mediante Resolución C.A. de 17 de octubre de 2011, el Tribunal de
segunda instancia confirmó la determinación impugnada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 471
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

3.- La posible justificación o no de su despido, no es motivo del presente “recurso”, el cual se


sustanciará en el proceso laboral que inició contra COMTECO LTDA. Finalmente, refiere que la
interposición de la acción se encuentra dentro del término establecido por el art. 129.II de la
Constitución Política del Estado (CPE), dado que la última decisión administrativa le fue
notificada el 17 de octubre de 2011.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante denuncia como vulnerados sus derechos al trabajo y a la inamovilidad laboral


como madre de un niño menor de un año, cita al efecto los arts. 46, 48.III y VI, 58, 60 y 410 de
la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicitó se conceda la tutela invocada, declarando: a) Ilegal, nulo e inconstitucional el proceso


interno efectuado en su contra, mientras dure su inamovilidad laboral; b) Se ordene la restitución
inmediata a su cargo como Encargada de Telemarketing; c) La cancelación de todos sus salarios
devengados a partir de la fecha de suspensión, demás derechos sociales reconocidos por la
Constitución Política de Estado y las Leyes; y, d) La indemnización de los daños y perjuicios
ocasionados.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 26 de enero de 2012, concurrieron la accionante asistida por


sus abogados; Oscar Gualberto Claure Villarroel en representación de los codemandados Jaime
de Ugarte Lazcano, Orlando Stuardo Jordán Quiroga, José Ángel Valenzuela Solíz, Mauricio
Antonio Torrico Saavedra, Dalsy Montaño Rivera, Alexander Sassha Torrico Tumaev, Luis
Fernando Murguía Rowe, Nelva del Carmen Garnica Numbela y Álvaro Fernando Gamboa
Afcha; ausentes los codemandados Carlos Zenteno Heredia, Franz Gonzales Zurita, Rolando
Ramos Gutiérrez, Carlos Salas Pinto y José Luis Tapia Rojas, pese a su legal citación (fs. 131 y
vta. a 133), no consta la inasistencia del representante del Ministerio Público, según se tiene del
acta cursante de fs. 482 a 483 de obrados; se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la accionante, ratificó el tenor integro de la acción.

A la pregunta del Presidente del Tribunal de garantías, respondió que se vulneraron los derechos
de su cliente a la inamovilidad laboral, al trabajo y los inherentes a los derechos del menor,
previstos en los arts. 46 y 48 de la CPE.

En uso de réplica, el abogado de la accionante manifestó que la última Resolución


Administrativa data de 16 de octubre de 2011, a partir de entonces se computa el plazo de seis
meses

I.2.2. Informe de los codemandados

Oscar Gualberto Claure Villaroel, abogado y apoderado de Jaime de Ugarte Lazcano, Orlando
Stuardo Jordán Quiroga, José Ángel Valenzuela Solíz, Mauricio Antonio Torrico Saavedra,
Dalsy Montaño Rivera, Alexander Sassha Torrico Tumaev, Luis Fernando Murguía Rowe,
Nelva del Carmen Garnica Numbela y Álvaro Fernando Gamboa Afcha, según los Testimonios
P28/2012 y 029/2012 de 25 de enero; presentó informe escrito y lo amplió en audiencia,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 472
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

indicando: 1) La accionante fue sometida a proceso interno en base a un informe de auditoría, en


el que se respetaron todos sus derechos, por cuanto no se vulneró el debido proceso. En primera
instancia la Comisión Mixta, estableció su despido por las causales establecidas en los arts. 16
inc. e) de la Ley General del Trabajo (LGT) y 9 inc. g) del Decreto Reglamentario de la Ley
General del Trabajo (DRLGT); en apelación, mediante Resolución de 17 de octubre de 2011, se
confirmó dicha determinación; 2) El referido proceso, en ninguna de sus instancias vulneró los
derechos invocados; los cuales no tienen carácter absoluto por encontrarse condicionados a que
el trabajador no incurra en causales de despido establecidas en la Ley General del Trabajo o
Decreto Reglamentario; 3) La inamovilidad de la mujer embarazada posee su limitación
conforme reza el Decreto Supremo (DS) 012/2009 de 12 de febrero, que en su artículo primero
reglamenta las condiciones de inamovilidad de la mujer embarazada y de padres progenitores
que trabajan en el sector publico y privado; 4) El art. 5 del citado DS 012/2009, previene que no
gozarán del beneficio de la inamovilidad los padres o progenitores que incurran en causales de
conclusión de la relación laboral atribuibles a su persona; y, 5) La suspensión de la accionante
se produjo el 27 de junio de 2011, sin goce de haberes, lo que denota la existencia de
inmediatez, de acuerdo al art. 129 de la CPE, debiendo en consecuencia declararse la
“improcedencia” de la acción y sea con costas y multa.

Carlos Zenteno Heredia, Franz Gonzales Zurita, Rolando Ramos Gutiérrez, Carlos Salas Pinto y
José Luis Tapia Rojas, codemandados no presentaron informe escrito y tampoco asistieron a
audiencia.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Social Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de


Cochabamba, constituido en Tribunal de garantías, mediante Resolución 001/2012 de 26 de
enero, cursante de fs. 484 a 489, CONCEDIÓ en parte la tutela solicitada, dejando sin efecto la
notificación con la Resolución de 17 de octubre de 2011 de segunda instancia, que confirmó la
sanción de despido y su consiguiente ejecutoria; disponiendo: i) Se proceda a una nueva
notificación, cuando el hijo de la accionante cumpla un año de edad; ii) La inmediata restitución
a las funciones que cumplía en COMTECO LTDA, antes de su despido; y iii) La cancelación de
todos los salarios y subsidios devengados a la fecha, incluida la lactancia hasta el año de edad de
su hijo, sin costas; con los siguientes fundamentos: a) La acción de amparo constitucional, se
instituyó contra los actos ilegales u omisiones indebidas de los funcionarios o particulares que
restrinjan, supriman o amenacen derechos y garantías de las personas, siempre que no hubiere
otro medio legal para dicha protección; b) Los derechos de la mujer embarazada, del neonato y
del recién nacido, son de innegable importancia para el Estado, por tratarse de sectores de la
sociedad particularmente vulnerables. En tal sentido el art. 45.V de la CPE, advierte que las
mujeres tienen derecho a una maternidad segura y gozan de especial asistencia y protección del
Estado durante el embarazo, parto en los periodos prenatal y posnatal; por su parte el art. 48.VI
del mismo texto, prevé que ninguna mujer será discriminada o despedida por dicha situación; c)
La Ley 975 de 2 de marzo de 1988, en su art. 1, erige la inamovilidad laboral de la mujer en
periodo de gestación hasta un año de nacido su hijo, incluyendo en su ámbito de aplicación al
sector público y privado, sin exclusión de ningún tipo, así cuenten con contratos permanentes o
eventuales; d) En el presente caso, la Resolución de destitución proviene de un proceso interno,
que debe ser postergada hasta que el hijo (a) cumpla un año de edad, así lo estableció la SC
1749/2003-R; e) Si en proceso interno, se determina la responsabilidad administrativa, e impone
como sanción la destitución de una trabajadora madre de un hijo menor a un año; esa situación,
imprime la necesidad de beneficiarla indirectamente para favorecer de manera directa al menor,
a fin de hacer viable la Ley 975; f) La citada Sentencia Constitucional, precisó que la condición
de mujer embarazada o madre un niño menor a un año de un año, no invalidan, ni constituyen
causal para dejar sin efecto la sanción impuesta por la autoridad competente, debiendo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 473
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

postergarse la misma hasta que desaparezca la protección; en el mismo sentido se pronunció la


SC 1837/2010-R; g) De no concederse la tutela se provocarían efectos insalvables para el menor
en cuanto a sus derechos primarios que precisan de protección inmediata, tomando en cuenta
que el despido implica la supresión del derecho a la seguridad social, que a su vez resguarda el
derecho a la salud y la vida. Derechos que no pueden depender de otros recursos e impone la
necesidad de protección inmediata, en cumplimiento de los arts. 48.VI de la CPE y 1 de la Ley
975. Así lo establece el art. 2 del DS 012 de 19 de febrero de 2009 y las SSCC 2582/2010-R,
0674/2011-R, 447/2000-R y 849/2000-R-; h) Los demandados con excepción de Calos Salas
Pinto y Rolando Ramos Gutiérrez, restringieron el derecho de la accionante al trabajo e
inamovilidad funcionaria y del menor a la seguridad social, a la salud y a la vida; y, i) En
consecuencia, no es preciso dejar sin efecto el proceso interno al que se sometió
voluntariamente, sino, postergar el cumplimiento de la resolución final hasta que el niño cumpla
un año de edad.

II. CONCLUSIONES

Realizada la revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. Refiere la accionante, que desde el 17 de mayo de 2004, trabajó en COMTECO LTDA.,
siendo designada como Responsable de Telemarketing en noviembre de 2007 (fs. 115 a 121).

II.2. Según Acta de Constitución de Tribunal de 23 de mayo de 2011, Dalsy Montaño Rivera,
Sassha Torrico Tumaev, Luis Fernando Murguia Rowe y Nelva del Carmen Garnica Nunbela,
en aplicación de lo dispuesto por el art. 64 del Reglamento Interno de COMTECO LTDA y en
cumplimiento de la instrucción de inicio de proceso interno contra la accionante según Control
de Trámite GG Al-016 de 28 de abril de 2011, se constituyó el Tribunal de primera instancia (fs.
96).

Mediante Resolución de 23 de mayo de 2011, los miembros del Tribunal de proceso de primera
instancia, determinaron la apertura de proceso interno contra Cynthia Cayo Ríos,
supervisora de Telemarketing, por haber incurrido presuntamente en las causales establecidas
en los arts. 58-a, b y f; y 65 del Reglamento Interno y 9 incs. a), e), y g) del Reglamento Ley
General Trabajo. Se dispuso la suspensión de funciones de la accionante hasta que concluya
el proceso interno, fijándose para el efecto la fecha de su declaración informativa (fs. 95). La
determinación de suspensión de la accionante sin goce de haberes, se produjo a partir del 27 de
junio del indicado año, según informó el abogado de los demandados en audiencia de acción de
amparo constitucional; misma que no fue rebatida por Cynthia Cayo Ríos (fs. 482 a 483).

II.3. En obrados cursa documental, que evidencia que la accionante ejerció medios de defensa a
través de la producción de prueba (fs. 78 a 81 y 83 a 87). Por Resolución 03/2011 de 3 de
agosto, los miembros de la Comisión Mixta de Proceso Interno, emitieron “resolución
condenatoria” contra Cynthia Cayo Ríos e impusieron la sanción de despido sin derecho a
desahucio e indemnización por incumplimiento de su contrato de trabajo y abuso de confianza;
y existiendo otros ilícitos penales, COMTECO LTDA, efectúe las denuncias correspondientes y
demandar el resarcimiento de daños y perjuicios ocasionados (fs. 56 a 66).

II.4. En grado de apelación, el Consejo de Administración de COMTECO LTDA, como


Tribunal de apelación, compuesto por Jaime De Ugarte Lazcano, Orlando Jordán Q., Ángel
Valenzuela Soliz, Mauricio Antonio Torrico Saavedra, Carlos Zenteno Heredia, Franz Gonzales
Zurita, Carlos Salas Pinto y José Luis Tapia Rojas, mediante Resolución 03/2011 de 17 de
octubre, determinó confirmar la Resolución 03/2011 de 3 de agosto, dictada por la
Comisión Mixta de Proceso Interno (fs. 46 a 50). En dicha determinación consta que Carlos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 474
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Salas Pinto fue de voto disidente; empero, firmó la Resolución; y Rolando Ramos Gutiérrez se
abstuvo de votar.

II.5. Según certificado de nacimiento Joshua Anthony Castillo Cayo, nació el 8 de abril de 2011
(fs. 18).

II.6. De fs. 92 a 94 de obrados, cursa acta de declaración informativa de Cynthia Cayo Ríos,
realizada el 30 de junio de 2011; así también, memoriales de proposición y producción de
prueba (fs. 78 a 81, 83, 90 y vta.); y, recurso de apelación en el cual denuncia ante los miembros
del Tribunal de alzada, la existencia de vicios de nulidad y solicitó a su vez la realización de una
audiencia (fs. 54 a 55).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Alega que encontrándose gozando de su descanso como madre de un recién nacido, la Comisión
Mixta de Proceso Interno de COMTECO LTDA., inició proceso interno en su contra; a la
conclusión del mismo se emitió resolución de despido, sin derecho a desahucio e indemnización,
la misma que fue confirmada en apelación por el Consejo de Administración. La no
consideración de su condición de madre de un niño menor de un año, conculcó sus derechos a la
estabilidad laboral y al trabajo. Por consiguiente corresponde analizar en revisión, si tales
argumentos son evidentes y si constituyen actos lesivos a los derechos de la accionante con la
finalidad de conceder o no, la tutela reconocida por este medio de defensa.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

Por disposición del art. 128 de la Norma Fundamental, esta acción se activa únicamente ante la
vulneración de derechos fundamentales contenidos en la Constitución Política del Estado y las
leyes, perpetrados por actos ilegales u omisiones indebidas de servidores públicos y/o particulares.

Se rige esencialmente, por los principios de subsidiariedad e inmediatez, el primero entendido


como el agotamiento previo o la constatación de la inexistencia de otras vías o recursos legales
para la protección inmediata de los derechos denunciados como conculcados; por cuanto, no
sustituye o reemplaza a los recursos o instancias ordinarias preestablecidas en el ordenamiento
jurídico. Respecto del segundo, su interposición debe hacerse en el plazo de seis meses,
computable a partir del conocimiento del hecho o notificación con el acto ilegal u omisión
indebida.

III.2. De la flexibilización del principio de subsidiariedad en caso de mujeres embarazadas


y/o madres de un niño menor de un año

Precisada la naturaleza jurídica de la presente garantía jurisdiccional y los principios que


permiten la activación de la protección que brinda, cabe resaltar que, cuando se trate de mujeres
en estado de gestación o madres trabajadoras de niños menores de un año de edad, no resulta
aplicable el principio de subsidiariedad, en el entendido que no pueden anteponerse aspectos
formales que hacen a esta acción frente a derechos que merecen tutela constitucional inmediata,
como son el derecho a la vida y a la salud.

En ese contexto, la jurisprudencia de este Tribunal ha sido uniforme al establecer que no es


necesario el agotamiento previo de los recursos ordinarios o administrativos para la protección
de los derechos fundamentales conculcados por actos ilegales u omisiones indebidas, dada su
naturaleza conforme se explicó.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 475


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.3. La inamovilidad laboral de la mujer en estado de gestación o madre de un niño menor


de un año

La Constitución Política del Estado, establece en el art. 45.V que: “Las mujeres tienen derecho a
la maternidad segura, con una visión y práctica intercultural; gozarán de especial asistencia y
protección del Estado durante el embarazo, parto y en los periodos prenatal y posnatal”,
disposición que se complementa con el contenido del art. 48.VI del mismo texto, que prescribe:
“Las mujeres no podrán ser discriminadas o despedidas por su estado civil, situación de
embarazo, edad, rasgos físicos o número de hijas o hijos. Se garantiza la inamovilidad laboral de
las mujeres en estado de embarazo, y de los progenitores, hasta que la hija o el hijo cumpla un
año de edad”; ambas disposiciones constitucionales reconocen a la maternidad segura como un
derecho fundamental, estado que no puede constituir un motivo de discriminación, lo que
implica su observancia y cumplimiento obligatorio en los periodos referidos, por parte del
Estado en sus distintas reparticiones públicas y entidades privadas.

En función a los referidos mandatos constitucionales, a través del DS 0012 de 19 de febrero de


2009, en sus arts. 1 y 2, se desarrolló que la madre y el padre progenitores que presten funciones
en el sector público o privado, no pueden ser despedidos, afectarse su nivel salarial ni su
ubicación en su puesto de trabajo hasta que el hijo o hija cumpla un año de edad; normativa que
se sustenta además en valores y otros derechos fundamentales, como el derecho a una fuente
laboral estable y en el deber que tiene el Estado, la sociedad y la familia, de garantizar la
prioridad del interés superior del niño, que comprende la preeminencia de sus derechos, la
primacía en recibir protección y socorro en cualquier circunstancia, en la atención de los
servicios públicos y privados.

Bajo ese marco normativo y los uniformes pronunciamientos del Tribunal Constitucional
Plurinacional al respecto, se concluye de manera general que la mujer en estado de gestación o
aquella que sea madre de un hijo o hija menor de un año, goza de inamovilidad laboral hasta que
el niño o niña cumpla un año de edad. Derecho que se hace directamente aplicable cuando fuere
arbitraria e ilegalmente despedida de sus funciones en franca inobservancia de su especial
condición.

III.4. Citación con el auto de apertura de proceso administrativo durante la baja prenatal y
posnatal

A partir de la puesta en vigencia del texto constitucional el 7 de febrero de 2009, rige en nuestro
país un nuevo modelo de organización jurídico-política o de Estado, orientado a la construcción
de un Estado Unitario, Social de Derecho Plurinacional Comunitario en busca del vivir bien
como uno de sus fines, para ello se sustenta en los principios y valores contenidos en el art. 8.II;
entre los cuales se encuentra la igualdad, reconocida por instrumentos internacionales como el
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de 1966 (art. 26 que establece la prohibición
de discriminación, como de obligaciones positivas) la Declaración Universal de Derechos
Humanos (art. 7 estableciendo la igualdad ante la ley), la Convención Americana sobre
Derechos Humanos (art. 24). Es así que el texto constitucional, reconoce a la igualdad como un
principio, valor y derecho fundamental, por su naturaleza social y moral para traducirse en
reglas normativas. En ese contexto, se está frente a un sistema constitucional, en el cual, la
técnica de la interpretación constitucional se sustenta en la ponderación de los valores,
principios y conceptos jurídicos indeterminados y que el Estado basa su paradigma en la
subordinación de la legalidad a la Constitución Política del Estado; es decir, la necesaria
compatibilidad que debe existir entre los contenidos de las leyes con los principios
constitucionales.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 476


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La igualdad a decir de Ignacio De Otto y Pardo, “…no puede ser entendido como el
mandamiento de que el derecho trate por igual a todos, como el mandamiento de que no se
confiere relevancia jurídica a los elementos diferenciadores. El principio de igualdad ha de tener
otra significación. Todo intento de considerar que el principio de igualdad tiene un contenido
material debe reducir este a un mandamiento relativo a la comparación, a un
mandamiento relativo a la clase de elemento comparativo que es posible utilizar para
distinguir lo igual de lo desigual, esto es, al criterio para conferir la relevancia a sus
elementos de coincidencias o a los de diferencias” (Obras Completas, Universidad de Oviedo,
Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2010, pág. 1451). De donde se advierte que la
igualdad consiste en el equilibrio a existir en el trato a los iguales y a los desiguales en sus
elementos diferenciadores a través de la equidad (las negrillas y subrayado nos pertenecen).

En función a lo explicado, los derechos fundamentales, contenidos en la Constitución Política


del Estado, no sólo tienen por finalidad regir las relaciones entre iguales, sino también proteger a
aquellos sectores o grupos de atención diferente; encomendando esa labor al Estado, a través del
desarrollo de políticas destinadas a materializar los derechos reconocidos en la Ley Fundamental
y el bloque de constitucionalidad, a través de un trato diferente en el acceso a ciertos derechos
que tiendan o les permitan acceder con equidad a una justicia social para vivir bien. Lo que se
pretende, es hacer efectivo el mandato constitucional contenido en el art. 9, referente a la
construcción de una sociedad más justa, cimentada en la no discriminación, que pudiera
suscitarse, concretamente, por razón del estado civil, situación de embarazo, edad, rasgos físicos
o número de hijas o hijos, según prevé el art. 48.VI del texto constitucional. En ese sentido, cabe
dejar sentado que la protección o atención preferente a un grupo prioritario, no puede implicar la
lesión a derechos fundamentales de otro sector.

Bajo ese contexto, la igualdad contenida en la Constitución Política del Estado y en el bloque de
constitucionalidad se constituye en formal, al reconocer a todos los miembros de la sociedad en
un plano de igualdad; empero, lo que se busca a través de su observancia en todos los ámbitos
jurídicos, es su efectiva materialización, como sería el caso de mujeres embarazadas o madres de
un niño o niña menor de un año, cuya situación respecto de los demás u otros sectores, por su
especial condición, se encuentra en un plano desigual, dado que durante la gestación, periodo
prenatal y posnatal, son etapas en los que se presenta un alto grado de vulnerabilidad,
colocándola en una situación de desventaja material, lo cual no puede concebirse teniendo en
cuenta que bajo el nuevo modelo constitucional, se pretende la eficacia máxima de los derechos.
En ese sentido, es preciso que dichas etapas se desarrollen en condiciones adecuadas de tal
forma que no afecten la salud física y emocional o psíquica de la madre y del recién nacido.

Con la finalidad de resguardar esa especial condición o situación, el art. 61 de la LGT,


modificado por el art. 31 del Decreto Ley 13214 de 24 de diciembre de 1975, establece que: “La
asegurada tendrá derecho durante el embarazo y el puerperio al subsidio de maternidad por un
plazo máximo de 45 días anteriores al parto y de 45 días posteriores a él, siempre que en estos
periodos no ejecute trabajo remunerado. Este subsidio se pagará a la asegurada que tenga un
mínimo de cuatro cotizaciones mensuales, dentro de los doce meses anteriores a la fecha en que
se cancela el subsidio prenatal”; o sea que toda mujer que se encuentre en estado de gestación y
después de nacido su hijo o hija, tiene derecho a descansar el lapso de tiempo establecido en la
citada disposición legal. Respecto del periodo posnatal, la SC 0143/2010-R de 17 de mayo,
sostuvo: “…la protección que brinda el Estado a la mujer trabajadora embarazada y en la
etapa posterior al parto, está directamente relacionada con el derecho al trabajo, reforzándose
en ese particularísimo caso -por su vinculación directa con la salud y seguridad de la madre y
del nasciturus, o hijo o hija- con la estabilidad e inamovilidad de su fuente de trabajo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 477


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

(…) el núcleo esencial del derecho reconocido como fundamental a la mujer embarazada y en
el estado de post parto con relación a su trabajo, estriba por una parte en la protección de esa
fuente de trabajo a través del reconocimiento de la inamovilidad funcionaria, y por otra, en el
tratamiento que se le de a ésta permitiéndole que desarrolle sus actividades en condiciones
adecuadas. El primer ámbito de aplicación de este derecho desde la perspectiva constitucional,
supone que el empleador no podrá determinar por causa alguna una solución de continuidad en
la relación de trabajo; en cambio, en el otro ámbito se da cuando existiendo la relación
laboral firme en el que de por medio no existe un despido o ruptura de la relación laboral, el
empleador no afecte las condiciones laborales de la mujer trabajadora embarazada, ya sea
por causa de reducción de sus haberes o manteniendo o agravando las tareas que
regularmente desempeñe la empleada o funcionaria en perjuicio evidente a su salud y
seguridad física, moral o psíquica” (las negrillas y subrayado nos corresponden).

De donde se concluye que, gozando la mujer de esa especial protección según dispone la norma
fundamental y la jurisprudencia citada, durante la baja médica prenatal y posnatal, no podrá ser
objeto o sujeto de despido o de circunstancias que tiendan de alguna manera a afectar el normal
desarrollo de su estado de gestación o posterior al parto, en perjuicio de su salud y seguridad
física, moral o psíquica, ello con la finalidad de efectivizar el mandato contenido en el art. 45.V
de la CPE, respecto a una maternidad segura y la inamovilidad laboral reconocida en el art.
48.VI del citado texto. Circunstancias, como sería el caso de un despido, suspensión de sus
funciones, la interrupción de los periodos prenatal y posnatal, o el inicio de proceso
administrativo interno que altere su situación laboral; en ese marco, cabe dejar
puntualizado que aún cuando el inicio de proceso administrativo interno se hubiere
realizado o dispuesto durante los referidos periodos, la prosecución del mismo, sólo podrá
tener lugar a partir de la citación con el auto de apertura y sus antecedentes, una vez
reincorporada la persona a su fuente laboral y en ningún caso durante el uso de los citados
beneficios.

Finalmente, cabe recalcar que las mujeres en estado de gestación o madres de un recién nacido
menor a un año de edad -según se expresó en el Fundamento Jurídico III.3 de este fallo-, sean
del sector público o privado, gozan de inamovilidad laboral; así también resulta importante,
recordar que dicha protección no implica crear un marco de impunidad, dado que sí es posible
iniciar en su contra un proceso administrativo que determine o defina su situación laboral,
siempre y cuando se observen los parámetros referidos líneas arriba. En ese caso, de presentarse
causales que den lugar a la conclusión de la relación laboral y resulte que la madre de un menor
de un año de edad, se encuentra apta para afrontar el proceso administrativo, no existe
impedimento alguno para su inicio y sustanciación; empero, -reiterando- sujeto a que se observe
estrictamente el debido proceso.

III.5. La inaplicabilidad de la inamovilidad laboral y la subsistencia de prestaciones a


favor del niño o niña menor de un año

En los Fundamentos Jurídicos precedentes, se hace referencia a la especial protección de la que


gozan las mujeres embarazadas y madres trabajadoras de un niño menor de un año -
inamovilidad laboral-, resguardo que en el marco del nuevo texto constitucional se hace
extensivo a los progenitores (art. 48.VI) hasta que el niño o niña cumpla un año de edad.
Tratándose de un grupo de la población de atención prioritaria y según se explicó merece un
tratamiento especial por la naturaleza de los derechos que protege respecto de la madre al trabajo
y sobre todo del recién nacido a la vida, a la salud que se concretan en la seguridad social como
derecho que hace posible la materialización de ambos.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 478


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El DS 0012, reglamentario de las condiciones de inamovilidad laboral de la madre y


progenitores que trabajen en el sector público o privado, establece en el art. 5.I, la vigencia de
este beneficio, al señalar que: “No gozarán del beneficio de inamovilidad laboral la madre
y/o padre progenitores que incurran en causales de conclusión de la relación laboral
atribuible a su persona previo cumplimiento por parte del empleador público o privado de
los procedimientos que fijan las normas para extinguir la relación laboral”; debiendo
entenderse que ante la comisión de un acto que dé lugar a la conclusión de la relación laboral y
que la misma sea atribuible a la mujer en estado de gestación o al progenitor de un menor de un
año de edad, establecida en su normativa interna y en la Ley General del Trabajo y su Decreto
Reglamentario, cuya comprobación se suscitare en debido proceso, la sanción se ejecutará
inmediatamente, sin lugar a inamovilidad laboral.

Lo precedente se explica en sentido, que si bien, el constituyente dispuso la especial protección a


este grupo de atención diferente, no puede entenderse como un marco de impunidad, que
implique que los actos u omisiones en que incurra en perjuicio de la institución o entidad en la
cual preste servicios sea afectada en sus fines o intereses específicos. En consecuencia, la
finalidad de la citada disposición legal es lograr un equilibrio entre la especial protección a las
mujeres en estado de gestación y progenitores de un niño o niña menor de un año de edad y el
empleador, sea del sector público o privado, a efectos de efectivizar también los valores de
igualdad y justicia como rectores de la administración de justicia.

En ese sentido, disuelta la relación laboral en debido proceso, conforme se explicó, no puede
significar el desconocimiento de los derechos fundamentales del recién nacido o niño(a) menor
de un año, porque el Estado tiene el deber de garantizar el interés superior del niño, que
comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir protección y socorro en
cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios públicos y privados (art. 60
de la CPE). Teniendo presente que se trata de una persona -menor de edad- que de conformidad
al art. 58 de la Ley Fundamental, es titular de derechos reconocidos por la Constitución Política
del Estado; por cuanto, corresponde resguardar la efectiva protección de sus derechos a la vida,
salud y la seguridad social (arts. 15, 18 y 35 de la CPE), los cuales no pueden ser desconocidos
como emergencia de la disolución de la relación laboral; al respecto conviene recordar que el
art. 2 del Código Niño, Niña y Adolescente (CNNA), dispone que se considera niño o niña a
todo ser humano desde su concepción, a su vez el art. 1 del CC con relación al comienzo de la
personalidad, establece que el nacimiento señala el comienzo de la personalidad y que al que
está por nacer se lo considera nacido para todo lo que pudiera favorecerle y para ser tenido como
persona.

En ese contexto, la previsión constitucional contenida en la parte final del art. 48.VI de la CPE,
debe ser interpretada en función al criterio teleológico y al principio de eficacia máxima de los
derechos fundamentales. La finalidad del citado precepto constitucional, es de tutelar los
derechos al trabajo de la madre y del progenitor hasta que el niño(a) cumpla un año de edad y a
su vez los derechos del ser en gestación y del recién nacido como la vida y la salud; empero, si
por alguna razón quedara disuelto el vínculo laboral conforme se explicó, corresponde que los
derechos del niño o niña sean resguardados, en el entendido que se trata de derechos cuya tutela
no puede estar supeditada a formalismos como sería el caso, que ante la inexistencia de un
vínculo laboral no sea posible la otorgación de las prestaciones previstas en el régimen de
asistencia familiar.

Consecuentemente, disuelto el vínculo laboral y teniendo presente que el empleador del sector
público o privado se encuentra compelido u obligado a continuar con la prestación de subsidios
al ser en gestación o, al niño o niña hasta que cumpla un año de edad; lo que significa, la
atención obstétrica a la madre durante el embarazo, el parto y el puerperio hasta que el recién
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 479
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

nacido cumpla un año de edad; y, la prestación de los subsidios; prenatal, consistente en la


entrega a la madre gestante, de un pago mensual, en dinero o especie, equivalente a un salario
mínimo nacional a partir del quinto mes de embarazo y fenece el último día del mes que nace el
niño (a); y de lactancia, consistente en la entrega a la madre de productos lácteos equivalentes a
un salario mínimo nacional, hasta que el niño (a) cumpla un año de edad. Prestaciones, que -
reiterando- deberán ser cubiertas por el empleador aún cuando ya no exista la relación laboral
emergente de un despido determinado en debido proceso.

III.6. Modulación a la SC 1749/2003-R de 1 de diciembre

Bajo el razonamiento que la inamovilidad laboral de la mujer trabajadora, embarazada o madre


de un niño menor de un año de edad, en instituciones públicas o privadas importa también el
resguardo de los derecho a la vida, la salud y seguridad social del nuevo ser, entendidos ambos
como un binomio -madre e hijo-, cuya protección se encuentra bajo responsabilidad del Estado,
la SC 1749/2003-R de 1 de diciembre, recogiendo el precepto contenido en el art. 193 de la
Constitución Política del Estado Abrogada (CPEabrg) y el artículo primero de la Ley 975 de 2
de marzo de 1988; así como el razonamiento de la SC 505-R de 24 de mayo, estableció: “Por
otra parte, está demostrado que en el momento de producirse la destitución, la agraviada era
madre de un menor que aún no había cumplido un año de edad, por lo que de no brindarse la
protección solicitada, aquel despido causaría efectos irreparables, no sólo a la recurrente, sino
principalmente al mencionado menor, en cuyo mérito es preciso prescindir de la subsidiariedad
que caracteriza al amparo; teniendo en cuenta que en situaciones análogas, este Tribunal en
invariable jurisprudencia ha concedido la tutela que brinda el amparo constitucional así la SC
505/2000-R “... por cuanto el derecho que se debe proteger no es solamente al trabajo, sino
otros derechos primarios de la recurrente y del menor recién nacido, los cuales necesitan
protección urgente e inmediata, ya que el retiro intempestivo de la recurrente importa también
la supresión del derecho a la seguridad social que a su vez, resguarda y garantiza el derecho a
la salud, derechos que con la medida adoptada ponen en riesgo el primer derecho, la vida,
que no puede estar pendiente de otros recursos o vías administrativas que establece la Ley”, y
por lo mismo gozan de protección inmediata, en función a lo dispuesto por el art. 193 CPE, en
cuyo mérito el matrimonio, la familia y la maternidad están bajo la protección del Estado,
precepto constitucional que guarda estrecha coherencia con el art. 1 de la Ley 975 de 2 de
marzo de 1988, que señala: “Toda mujer en periodo de gestación hasta un año del nacimiento
del hijo, gozará de inamovilidad en su puesto de trabajo en instituciones públicas y privadas”.
En ese contexto jurisprudencial se han dictado entre otras las SSCC 447/2000-R, 849/2000-R,
807/2001-R, 483/2002-R, 054/2003-R, 068/2003-R, 238/2003-R y 246/2003-R.

(…) sin embargo, es necesario considerar que si dentro de ese proceso interno, se determinó
responsabilidad administrativa y se impuso como sanción la destitución, puede ocurrir que,
como en el caso que se analiza, la servidora pública procesada y sancionada sea madre de un
hijo menor a un año de edad, situación que hace que esté protegida circunstancialmente, por
la Ley 975.

Considerando la situación de la recurrente y el menor, dentro del ámbito de protección


establecido por el art. 193 CPE y los fundamentos expuestos, no invalidan ni constituyen
causal para dejar sin efecto la sanción impuesta por la autoridad competente, sin embargo
impone la postergación, su ejecución y sus efectos hasta que el hijo cumpla un año de edad y
desaparezca la protección que le brinda el art. 1 de la citada Ley 975, pudiendo entonces
ejecutarse la resolución de sanción contra la ahora recurrente” (lo resaltado nos pertenece).

A partir, de la citada Sentencia Constitucional, los pronunciamientos de ése Tribunal fueron


uniformes al mantener dicho razonamiento (SSCC 1650/2010-R y 0764/2011-R entre otras), en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 480
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

el entendido que se trata de un sector de atención diferente, que goza de especial protección. El
actual texto constitucional, prevé la inamovilidad laboral de las mujeres en estado de embarazo y
de los progenitores hasta que el hijo o hija cumpla un año de edad -art. 48.VI-, mandato
reglamentado por el art. 5 del DS 0012 de 19 de febrero de 2009, que prescribe en su primer
parágrafo los casos en los cuales no podrá aplicarse el beneficio de la estabilidad laboral, según
se explicó en el Fundamento Jurídico precedente.

Consecuentemente, de incurrir la mujer embarazada y/o progenitor de un niño(a) menor


de un año de edad, en causales de conclusión o extinción de la relación laboral atribuibles a
su persona, determinadas en previo proceso conforme a los procedimientos previstos para
el sector público o privado, no resulta aplicable el beneficio de inamovilidad laboral hasta
que el recién nacido cumpla un año de edad, debiendo ejecutarse inmediatamente,
conforme se desarrolló en el Fundamento Jurídico III.5 del presente fallo; empero, -
reiterando- queda subsistente el beneficio para el ser en gestación o recién nacido menor a
un año de edad, en los términos expuestos. Constituyendo dicho razonamiento una
modulación a la SC 1749/2003-R de 1 de diciembre y posteriores Sentencias Constitucionales.

III.7. La suspensión antes de la sustanciación del proceso administrativo, vulnera el debido


proceso y la presunción de inocencia

Inicialmente, conviene recordar que el debido proceso, concebido en nuestro texto constitucional
en su triple dimensión de principio, garantía y derecho fundamental -arts. 115.II, 117, 137 y 180-,
es un instrumento de defensa de derechos fundamentales y garantías constitucionales durante la
tramitación del proceso judicial o administrativo, en el cual deberá observarse la estricta sujeción
de los actos al procedimiento establecido en la norma. Entonces, tiene por objeto garantizar un
proceso exento de posibles abusos originados en actuaciones u omisiones procesales o en
decisiones que diriman determinada situación jurídica o administrativa, siendo su fin último la
materialización de los valores jurídicos de justicia e igualdad, en el entendido que sólo a través de
ellos se logrará la eficacia máxima de los derechos contenidos en la Constitución Política del
Estado. De otra parte, la presunción de inocencia, concebida por la Ley Fundamental como una
garantía vinculada estrechamente con el derecho al debido proceso, implica el estado de inocencia
durante la realización de un proceso previo a la imposición de una sanción firme -judicial o
administrativa-.

En ese sentido, en materia administrativa cabe distinguir entre las medidas preventivas y las
sanciones propiamente dichas; las primeras, son aquellas que durante la sustanciación del proceso
se disponen de forma temporal, con la única finalidad de mantener una situación inalterable en
tanto se tramita el proceso y se demuestre la responsabilidad, como sería el caso de una suspensión
temporal del ejercicio de funciones; y, las segundas son aquellas que resultan de la sustanciación
de un debido proceso, según el ordenamiento jurídico de la materia, en cual se determinen
sanciones como la restricción de percibir un salario u otra medida. En síntesis, la suspensión
temporal como medida preventiva, no podrá darse sin goce de haberes, en el entendido que
privar de un medio de subsistencia, significaría una sanción anticipada sin que previamente
exista una determinación firme sobre la responsabilidad o inocencia de la persona y/o
funcionario.

Consecuentemente, las mujeres trabajadoras que se encontraren en uso de su baja médica


prenatal y posnatal, gozan de una protección especial o reforzada en sentido, que no sólo se
resguarda su derecho al trabajo sino también los derechos a la vida y a la salud del nuevo
ser; por cuanto, es menester aclarar que en el caso de mujeres embarazadas, la medida
preventiva de suspensión temporal sin goce de haberes, al inicio del proceso administrativo,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 481


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

resulta inaplicable, dado que ella sólo podrá darse cuando exista una resolución firme
emergente de un debido proceso que determine su sanción.

III.8. Análisis del caso concreto

En la problemática planteada, COMTECO LTDA, en aplicación del art. 64 del Reglamento


Interno, mediante Control de Trámite GG Al-016 de 28 de abril de 2011, instruyó el inicio de
proceso interno contra Cynthia Cayo Ríos, como Responsable de Telemarketing de dicha
entidad; el Tribunal de primera instancia se constituyó el 23 de mayo de ese año y en la misma
fecha determinaron la apertura de dicho proceso por haber incurrido en las causales descritas en
la Conclusión II.2 de este fallo, disponiendo al mismo tiempo la suspensión de sus funciones
hasta que concluya el proceso, pese a encontrarse en ese momento en uso de su baja posnatal.
Finalmente, sin considerar su condición de madre de un niño menor de un año, fue despedida.

III.8.1..Con relación a la resolución de inicio de proceso administrativo interno durante los


periodos de baja prenatal y posnatal

Así precisados los hechos que motivaron la interposición de la presente acción, corresponde
puntualizar que el nacimiento del hijo de la accionante se produjo el 8 de abril de 2011 y la
Resolución de inicio de proceso interno data de 23 de mayo de ese año; cuando los cuarenta y
cinco días de baja posnatal aún no concluyeron. Periodo en el cual, según se desarrolló en el
Fundamento Jurídico III.4 de este fallo, bajo ningún concepto podía afectarse la situación laboral
de la accionante, por encontrarse en uso de un beneficio, provocando con dicho acto su
desventaja o desigualdad material respecto del empleador, dado que el inicio del proceso interno
debió realizarse el 24 de mayo de igual año, en el entendido que el cómputo de los cuarenta y
cinco días se realiza a partir del día siguiente de producido el nacimiento de Joshua Antony
Castillo Cayo, o sea a partir del 9 de abril de ese año.

Empero, de la revisión de obrados y conclusiones formuladas en la presente Sentencia


Constitucional, la accionante, aún cuando se determinó el inicio de proceso administrativo
interno en su contra, durante su baja posnatal, ejerció de manera amplia su derecho de defensa,
prestó declaración, propuso medios de prueba e impugnó la resolución que dispuso su despido;
dicho de otra manera, ante el primer acto -inicio de proceso y suspensión sin goce de haberes-
entendido como ilegal, asumió defensa durante todas las etapas del citado proceso, sin
cuestionar en la presente acción que durante el mismo se hubieren lesionado sus derechos
fundamentales y garantías constitucionales. Por cuanto, sólo para el caso concreto, no amerita la
anulación del mismo, dado que la accionante no alegó vulneración alguna a derechos
fundamentales durante la sustanciación del proceso seguido en su contra. Debiendo en casos
posteriores, considerarse lo desarrollado en el Fundamento Jurídico III.4 del presente fallo, en
sentido que no podrá iniciarse proceso administrativo interno, por causales que dieren lugar a la
conclusión de la relación laboral, durante los periodos de baja prenatal y posnatal; lo cual no
impide que antes de la etapa prenatal se determine el inicio y se sustancie el proceso administrativo
interno y de igual forma a la conclusión de la etapa posnatal.

III.8.2. Con relación al proceso administrativo interno

De acuerdo a las conclusiones formuladas en la presente Sentencia Constitucional, se advierte que


el despido de la accionante, emerge de la sustanciación de un proceso administrativo en el cual se
determinó su despido, decisión confirmada en grado de apelación por el Consejo de
Administración de COMTECO LTDA; empero, resulta importante precisar que el inicio del
proceso, tiene su origen en la Resolución de 23 de mayo de 2011 -Conclusión II.2 de este fallo-, en
la que también se ordenó la suspensión de funciones de la accionante hasta que concluya el proceso
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 482
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

interno, que de acuerdo a lo informado en audiencia de acción de amparo constitucional, la


suspensión sin goce de haberes se hizo efectiva el 27 de junio de igual año; es decir, sin que
previamente se hubiere sustanciado y concluido el proceso administrativo interno, se privó a la
accionante de percibir sus salarios y los subsidios correspondientes a su hijo menor de un año de
edad.

En ese marco y teniendo presente que el debido proceso tiene por objeto garantizar que el proceso
se desarrolle exento de posibles abusos originados en actos u omisiones tendientes a lesionar
derechos fundamentales, la decisión de suspender a la accionante sin goce de haberes antes de que
hubiere concluido el proceso en su contra, constituye un acto ilegal que vulnera el debido proceso
como garantía jurisdiccional y derecho fundamental, dado que implica una sanción anticipada, que
se agrava aún más, considerando que se trata de una mujer trabajadora madre de un niño menor de
un año de edad, que goza de la prestaciones de subsidios por asignaciones familiares. En otros
términos, la determinación de suspensión de funciones sin goce de haberes entre tanto se sustancie
el proceso administrativo interno, lesiona el debido proceso, en el entendido que no puede aplicarse
de manera anticipada, una sanción que no fuere producto de un debido proceso en sus diferentes
instancias.

III.8.3 Con relación a la inamovilidad laboral solicitada

De los Fundamentos Jurídicos precedentes y la modulación efectuada, el beneficio de inamovilidad


laboral, contenido en el art. 48.VI de la Constitución Política del Estado, no resulta aplicable al
caso concreto, dado que en debido proceso se determinó la disolución de la relación laboral, en
función a que la accionante incurrió en causales atribuibles a su persona, que dieron lugar al inicio
de proceso administrativo interno en su contra, conforme previene el art. 5.I del DS 0012.

De otra parte, no puede dejarse de lado que Cynthia Cayo Ríos, asumió defensa en debida forma
durante las distintas etapas del proceso seguido en su contra, comprobándose la comisión de las
causales que dieron lugar a la extinción de la relación laboral, contenidas en la Ley General del
Trabajo y su Decreto

Reglamentario.

III. 9. Otras consideraciones

Así resuelto el problema jurídico planteado, cabe referir, de la lectura del memorial de acción de
amparo y ampliación de 5 de enero de 2012, se observa que la demanda no se dirigió contra todos
los miembros del Consejo de Administración; empero, cursa a fs. 131 de obrados, que Jaime De
Ugarte Lazcano, Presidente del Consejo de Administración, fue citado por cédula e intervino en
audiencia de acción de amparo constitucional, a través de su abogado y apoderado, según se tiene
del acta cursante a fs. 482 a 483; por cuanto, asumió defensa en debida forma y convalidó que la
demanda no se hubiere dirigido en su contra. Finalmente, se advierte que la Resolución 03/2011 de
17 de octubre, que confirmó el despido de la accionante, no fue firmada por el codemandado
Rolando Ramos Gutiérrez, dado que se abstuvo de intervenir en la misma, por cuanto no incurrió
en acto ilegal alguno que lesionara los derechos de Cynthia Cayo Ríos; en ese sentido, los efectos
de la Resolución no alcanzan a su persona.

Por los fundamentos expuestos, el Tribunal de garantías, al haber concedido en parte la tutela
invocada, aunque con otros fundamentos, obró correctamente.

POR TANTO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 483


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo expuesto el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: 1º
APROBAR en parte la Resolución de 001/2012 de 26 de enero, cursante de fs. 484 a 489,
pronunciada por la Sala Social Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de
Cochabamba; sólo en lo que respecta a: a) El pago de salarios durante el lapso de tiempo que
Cynthia Cayo Ríos, fue ilegalmente suspendida; es decir, a partir del 27 de junio de 2011, hasta
la fecha de notificación con la Resolución 03/2011 de 17 de octubre; y, b) El pago de subsidios
por asignaciones familiares de prenatalidad a partir del quinto mes de gestación diciembre de
2010 al 30 de abril de 2011- y de lactancia hasta que el recién nacido cumpla un año de edad -8
de abril de 2012-; en consecuencia; 2º DENEGAR la tutela solicitada; en cuanto a la
inamovilidad laboral.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr.Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0077/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00163-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución 01 de 13 de enero de 2012, pronunciada dentro de la acción de


libertad interpuesta por Freddy Rivera Vargas contra Nuria Gisela Gonzales Romero y
Karen Lorena Gallardo Sejas, Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de enero de 2012, cursante de fs. 32 a 33 vta., el accionante


señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido en su contra por el delito de estupro, la Sala Penal
Primera conformada por las Vocales ahora demandadas, pronunciaron el Auto de Vista de
10 de enero de 2012, mediante el cual de manera ultra petita declararon procedente el
recurso de apelación incidental interpuesto por la parte contraria y revocaron la medida
cautelar dispuesta por el Juez a quo, ordenando su detención preventiva sin la debida
motivación, “frente a la abundante prueba literal” que presentó para sustentar su libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 484


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De conformidad con lo previsto por el art. 398 del Código de Procedimiento Penal (CPP), los
tribunales de alzada deben circunscribir su resolución a los aspectos cuestionados y no fallar
al margen de lo pedido por el imputado o la víctima, menos dejar de resolver algunas
pretensiones deducidas por una de las partes, de darse esta situación ésta resulta incongruente,
carente de la debida motivación y fundamentación.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la libertad personal, a la seguridad


jurídica, a la presunción de inocencia y al debido proceso, previstos en los arts. 22, 23.I y
III, 115.II y 116.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la presente acción con responsabilidad civil y penal, y: a) Se disponga su


libertad irrestricta, librando el respectivo mandamiento; y, b) Se mantengan subsistentes las
medidas sustitutivas que le fueron impuestas por Auto de 7 de diciembre de 2011.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 13 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 97
a 99, se produjeron los siguientes hechos.

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, manifestó que: 1) Las autoridades demandadas revocaron las
medidas sustitutivas impuestas por el Juez cautelar, consistentes en la presentación cada siete
días ante el Fiscal asignado, las prohibiciones de salir del país y de acercarse a la víctima,
además de la presentación de dos garantes; por lo que cumpliendo con dicha Resolución,
presentó el arraigo y la documentación de los dos garantes, a cuyo efecto se señaló audiencia
para efectivizarlas para el 14 de febrero de 2012; 2) Ha demostrado que no existe peligro de
fuga, pues acreditó tener familia, domicilio y trabajo, así también, probó la inexistencia de
riesgo de obstaculización; empero, las Vocales demandadas no valoraron el certificado de
arraigo que presentó con antelación, ni los garantes que ofreció; 3) Al revocar la medida
cautelar, las demandadas debieron fundamentar los riesgos procesales, empero no lo hicieron
así; por el contrario, no argumentaron los riesgos procesales que motivaron la extrema medida;
y, 4) De conformidad con el art. 116 de la CPE, se presume la inocencia mientras no exista
sentencia condenatoria ejecutoriada.

I.2.2. Informe de los servidores públicos demandados

Las Vocales demandadas, en el informe que cursa de fs. 95 a 96, sostuvieron lo siguiente: i)
Por Auto de Vista de 10 de enero de 2012, declararon procedentes los recursos de apelación
incidental formulados por el Ministerio Público y la víctima, dentro del proceso penal
seguido contra el ahora accionante por el supuesto delito de estupro, disponiendo su
detención preventiva en el penal de “San Pablo” de Quillacollo; ii) No es evidente que se
hubiere fallado en forma ultra petita, pues tanto el Ministerio Público como la víctima a
tiempo de formular sus recursos de apelación, solicitaron la revocatoria del Auto
impugnado y la aplicación de la detención preventiva, por tal razón, en sujeción de lo
previsto en el art. 398 del CPP y al constatarse la concurrencia de los presupuestos
previstos en el art. 233 del mismo Código, por existencia de riesgo procesal de
obstaculización sustentado en el art. 235.1 y 2 de la misma norma, dispusieron la detención
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 485
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

preventiva del hoy accionante; iii) El Auto de Vista impugnado se encuentra


suficientemente motivado, de tal forma que no resulta arbitrario, ni irrazonable,
circunstancia que impide que la jurisdicción constitucional active su ámbito de protección,
máxime si el accionante no ha dado cumplimiento a lo establecido en la SC 0085/2006 -R de
25 de enero, que exige el cumplimiento de varios requisitos para que la jurisdicción
constitucional ingrese a revisar y cuestionar la interpretación de la legalidad ordinaria, tales
como los de precisar los derechos o garantías que fueron lesionados por el intérprete
estableciendo el nexo de causalidad, explicar por qué la labor interpretativa impugnada
resulta insuficientemente motivada, arbitraria, incongruente o con error evidente, entre
otras exigencias; y, iv) Por otro lado, las medidas cautelares por el principio de
“revisabilidad”, no causan estado; son modificables aún de oficio como lo establece el art.
250 del CPP; consecuentemente, el accionante tiene abiertas las vías respectivas para
solicitar la cesación de su detención preventiva impuesta; por lo que finalizaron solicitando
se deniegue la acción presentada en su contra.

I.2.3. Resolución

El Juez de Partido, Liquidador y de Sentencia de Quillacollo, mediante Resolución 01/12


de 13 de enero de 2012, cursante de fs. 100 a 104 vta., denegó la acción de libertad, bajo
los siguientes argumentos: a) La SC 1187/2001-R de 14 de noviembre, ha señalado que el
elemento determinante para la aplicación de la detención preventiva no es la gravedad del
delito sino la concurrencia de los presupuestos establecidos en los arts. 233, 234 y 235
del CPP, estableciendo posteriormente en la SC 1101/2002 -R de 13 de septiembre, que no
se podrá imponer ni aplicar la detención preventiva exponiendo otros motivos que no
sean los exigidos por el procedimiento aunque el tribunal o juez los considere de
gravedad o relevantes; b) En el presente caso, la detención preventiva dispuesta como
medida cautelar fue determinada a solicitud expresa de parte, tanto por el Ministerio
Público como de la víctima y no de oficio o en forma ultra petita; c) El accionante no ha
demostrado la falta de motivación alegada; por el contrario, se constata que l a restricción
de la libertad de éste se encuentra dentro de los límites señalados por ley, al concurrir los
presupuestos estipulados en los arts. 233, 234 y 235.1 y 2 del CPP; y, d) La
jurisprudencia constitucional ha determinado que sólo se puede analizar la interpretación
efectuada por los jueces y tribunales ordinarios cuando se impugna una labor como
irrazonable, debiendo el accionante, en este supuesto, explicar por qué la labor
interpretativa impugnada resulta insuficientemente motivada, arbitraria, i ncongruente o
con error evidente, debiendo además precisar los derechos y garantías que fueron
lesionados.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Dentro del proceso penal seguido contra Freddy Rivera Vargas, ahora accionante, por
la presunta comisión del delito de estupro, el 7 de diciembre de 2011, se celebró la
audiencia de medidas cautelares, en la que la Jueza de Instrucción Mixta, Liquidadora y
cautelar de Sipe Sipe por Auto de la misma fecha, impuso al accionante la aplicación de
medidas sustitutivas a la detención preventiva consistentes en: 1) Presentación cada siete
días ante el Fiscal asignado al caso y suscripción del libro correspondiente; 2) Arraigo; 3)
Prohibición de acercarse al domicilio de la víctima; 4) Prohibición de comunicase con la
víctima y los familiares de aquella, siempre que ello no afecte su derecho a la defensa; y, 5)

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 486


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Fianza personal consistente en dos garantes personales con solvencia económica y


domicilio conocido (fs. 4 a 6).

II.2. Contra dicha Resolución, el Ministerio Público presentó apelación incidental, solicitando la
aplicación de la detención preventiva del accionante (fs. 56 a 57). Por su parte, la víctima a
través de su abogado, presentó recurso de apelación en la audiencia de medidas cautelares,
protestando presentar prueba ante el Tribunal de apelación (fs. 6 vta.), pidiendo se ordene la
detención preventiva del accionante (fs. 45 a 46 vta.).

II.3. Por Auto de Vista de 10 de enero de 2012, las Vocales ahora demandadas, declararon
procedente las apelaciones presentadas y dispusieron la detención preventiva del accionante (fs.
47 a 50).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la libertad personal, a la seguridad


jurídica, a la presunción de inocencia y al debido proceso, como consecuencia del Auto de Vista
pronunciado por las Vocales demandadas, mediante el cual decidieron en forma ultra petita y
sin la debida motivación y fundamentación revocar las medidas sustitutivas que le fueron
impuestas y disponer su detención preventiva. En consecuencia, en revisión de la Resolución
dictada por el Juez de garantías, corresponde dilucidar si tales extremos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

Previo a ingresar al análisis del caso concreto, es necesario referirse a la naturaleza jurídica de la
acción de libertad.

En ese orden, la SC 0037/2012 de 26 de marzo, estableció que: “La acción de libertad conocida
en el derecho comparado y en nuestra legislación abrogada como 'recurso de habeas corpus',
encuentra fundamento en innumerables instrumentos normativos de orden internacional como
en la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre, Declaración Universal de
Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, disposiciones
normativas que forman parte del bloque de constitucionalidad, de conformidad a lo dispuesto
por el art. 410 de la CPE. Se trata de un mecanismo de defensa constitucional extraordinario de
carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la protección inmediata y efectiva
de los derechos fundamentales a la libertad física como de locomoción en casos de detenciones,
persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o indebidos por parte de servidores
públicos o de personas particulares; así como a la vida cuando esté en peligro.

Esta garantía de carácter procesal constitucional se encuentra consagrada en el art. 125 de la


CPE, donde dispone que: 'Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera
a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y, solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad'. Norma
constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP), la cual establece que su objeto es la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la libertad de locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de esos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de
restricción o supresión.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 487
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En tal sentido, debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está diseñada
sobre la base de dos pilares esenciales, el primero referente a su naturaleza procesal y el segundo,
compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que configura el
contenido esencial de esta garantía; es decir, su naturaleza procesal, se establece que se encuentra
revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada por sus
características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e inmediación; procede
contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no reconoce fueros ni privilegios.
Postulados que pueden ser inferidos de la norma constitucional antes referida.

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se encuentra
configurado por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE, se
resumen en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la
libertad física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya
procesamiento indebido; y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida”.

A lo señalado cabe agregar que de manera excepcional opera el principio de subsidiariedad ante la
existencia de medios de impugnación específicos e idóneos para restituir de manera inmediata los
derechos objeto de su protección o bien cuando se activa de manera paralela un medio de defensa
previsto en el ordenamiento jurídico tanto en la vía constitucional como en la ordinaria, conforme se
ha establecido en las SSCC 0160/2005-R, 0181/2005-R, 0008/2010-R y 0080/2010-R, entre
otras.

III.2. La exigencia de motivación en los tribunales de apelación al momento de resolver


medidas cautelares

La jurisprudencia constitucional ha establecido en forma uniforme la observancia en el cumplimiento


de las condiciones y formalidades que debe cumplir la resolución que disponga la detención
preventiva de un imputado, exigencia que debe ser observada tanto por el juez cautelar como por el
tribunal que resuelve la apelación de medidas cautelares. Así, la SC 1141/2003-R de 12 de agosto,
reiterada por las SSCC 0434/2011-R y 0856/2011-R, entre otras, señaló que: “...la aplicación de una
medida cautelar de carácter personal en el ámbito procesal penal debe cumplir con las condiciones
de validez legal, lo que significa que, la autoridad judicial competente, para adoptar la decisión de
aplicar la detención preventiva, de una parte, está obligado a verificar y determinar la concurrencia
de los requisitos previstos por el art. 233 CPP, para lo que deberá contrastar la solicitud
fundamentada del Ministerio Público con los elementos de prueba presentados sobre la concurrencia
de los requisitos, en el marco de las normas previstas por los arts. 234 y 235 CPP; de otra parte,
deberá fundamentar en derecho la decisión de aplicar la medida cautelar de carácter personal, pues
tomando en cuenta que uno de los principios fundamentales inherentes al Estado Democrático de
Derecho es la motivación de las decisiones de las autoridades públicas, el juez está obligada a
expresar los motivos de hecho y de derecho en que se basa su convicción determinativa de la
concurrencia de los requisitos, así como el valor otorgado a los medios de prueba, esa
fundamentación no puede ser reemplazada por la simple relación de los documentos o la mención de
los requerimientos de las partes; de modo que está obligado a expresar los presupuestos jurídicos
que motivan la medida, con cita de las normas legales aplicables y la descripción clara y objetiva de
los elementos de convicción concurrentes”.

En esta perspectiva, la SC 0782/2005-R de 13 de julio, refiriéndose al cumplimiento de estos


requisitos por parte de los tribunales que conocen la apelación de medidas cautelares, estableció lo
siguiente: “Ahora bien, la exigencia de pronunciar una resolución motivada en la que se establezca
la concurrencia de los requisitos de validez para determinar la detención preventiva, entendiendo
por motivo fundado a aquél conjunto articulado de hechos que permiten inferir de manera objetiva
que la persona imputada es probablemente autora de una infracción o partícipe de la misma y que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 488
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

existe riesgo de fuga y/u obstaculización de la averiguación de la verdad no sólo alcanza al juez
cautelar, sino también al tribunal que conozca en apelación la resolución que disponga, modifique
o rechace las medidas cautelares, toda vez que si bien de conformidad con el art. 251 del CPP, las
medidas cautelares dispuestas por el juez cautelar, pueden ser apeladas y, por lo mismo,
modificadas, ello no significa que el tribunal de apelación cuando determine disponer la detención
preventiva, esté exento de pronunciar una resolución lo suficientemente motivada, en la que se
exprese la concurrencia de los dos requisitos que la ley impone para la procedencia de esa medida
cautelar.

Consecuentemente, el Tribunal de apelación, está obligado a motivar y fundamentar su Resolución,


precisando los elementos de convicción que le permiten concluir en la necesidad de revocar las
medidas sustitutivas y aplicar la detención preventiva; a cuyo efecto debe también justificar la
concurrencia de los presupuestos jurídicos exigidos por el art. 233 del CPP y una o varias de las
circunstancias establecidas por los arts. 234 y 235 del CPP, mediante una resolución debidamente
fundamentada, conforme exige el art. 236 del CPP, puesto que sólo cuando se han fundamentado
debidamente estas dos situaciones, se puede disponer la detención preventiva (las negrillas y
subrayado nos corresponden). Entendimiento, asumido por las SSCC 0089/2010-R y 0434/2011-R,
entre otras.

En efecto, el deber de motivación de los fallos supone un elemento fundamental del debido proceso,
conforme ha expresado la SC 0012/2006-R de 4 de enero, al señalar que: “La motivación de los
fallos judiciales está vinculada al derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional eficaz, (…),
y se manifiesta como el derecho que tienen las partes de conocer las razones en que se funda la
decisión del órgano jurisdiccional, de tal manera que sea posible a través de su análisis, constatar si
la misma está fundada en derecho o por el contrario es fruto de una decisión arbitraria; sin
embargo, ello no supone que las decisiones jurisdiccionales tengan que ser exhaustivas y
ampulosas o regidas por una particular estructura; pues se tendrá por satisfecho este requisito aun
cuando de manera breve, pero concisa y razonable, permita conocer de forma indubitable las
razones que llevaron al Juez a tomar la decisión; de tal modo que las partes sepan las razones en
que se fundamentó la resolución; y así, dada esa comprensión, puedan también ser revisados esos
fundamentos a través de los medios impugnativos establecidos en el ordenamiento; resulta claro que
la fundamentación es exigible tanto para la imposición de la detención preventiva como para
rechazarla, modificarla, sustituirla o revocarla” (las negrillas son nuestras).

III.3. El alcance de lo previsto en el art. 398 del CPP y la exigencia de motivación en las
resoluciones que disponen la detención preventiva

Extractada la línea jurisprudencial sobre la importancia de la exigencia de fundamentar las decisiones


y su relevancia aún mayor en lo que respecta a medidas cautelares, cabe referirse a lo previsto en el
art. 398 del CPP, sobre los límites establecidos a los tribunales de alzada al momento de conocer y
resolver los recursos de apelación presentados por las partes en el marco de la aplicación de medidas
cautelares.

En ese cometido, la norma contenida en el art. 398 del citado cuerpo legal, establece que “Los
tribunales de alzada circunscribirán sus resoluciones a los aspectos cuestionados de la resolución”.
De la norma legal precedente, de manera general es posible concluir que los tribunales de alzada sólo
pueden resolver y pronunciarse sobre los agravios expresados en la apelación, no pudiendo ir más allá
de lo que la parte apelante no hubiere cuestionado respecto de la resolución apelada, dado que el
ámbito en el que deben circunscribir su actuación es a resolver los aspectos impugnados de quien
tiene derecho de recurrir.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 489


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Sin embargo, tratándose de la aplicación de medidas cautelares, dicha normativa no debe ser
entendida en su literalidad sino interpretada en forma integral y sistemática, por lo que también cabe
referirse a lo establecido en el art. 233 del CPP, modificado por la Ley 007 de 18 de mayo de 2010,
cuando señala que: “Realizada la imputación formal, el juez podrá ordenar la detención preventiva del
imputado, a pedido fundamentado del fiscal o de la víctima aunque no se hubiera constituido en
querellante, cuando concurran los siguientes requisitos: 1. La existencia de elementos de convicción
suficientes para sostener que el imputado es, con probabilidad, autor o partícipe de un hecho punible;
2. La existencia de elementos de convicción suficientes de que el imputado no se someterá al proceso
u obstaculizará la averiguación de la verdad”.

Finalmente, cabe remitirse a lo previsto en el 236 del CPP, entre cuyos requisitos del auto de
detención preventiva se encuentran: “3) La fundamentación expresa sobre los presupuestos que
motivan la detención, con cita de las normas legales aplicables”.

En el marco de las normas legales citadas, aplicables al caso que se examina, se establece que el
límite previsto por el art. 398 del CPP a los tribunales de alzada, de circunscribirse a los aspectos
cuestionados de la resolución, no implica que los tribunales de apelación se encuentren eximidos
de la obligación de motivar y fundamentar la resolución por la cual deciden imponer la medida
cautelar de detención preventiva, quedando igualmente obligados a expresar la concurrencia de
los dos presupuestos que la normativa legal prevé para la procedencia de la detención preventiva,
en el entendido que ésta última determinación únicamente es válida cuando se han fundamentado
los dos presupuestos de concurrencia, para cuya procedencia deberá existir: 1) El pedido
fundamentado del fiscal o de la víctima aunque no se hubiere constituido en querellante; 2) La
concurrencia de los requisitos referidos a la existencia de elementos de convicción suficientes para
sostener que el imputado es, con probabilidad, autor o partícipe de un hecho punible y la existencia de
elementos de convicción suficiente de que el imputado no se someterá al proceso u obstaculizará la
averiguación de la verdad; circunstancias que deben ser verificadas y determinadas por el tribunal y
estar imprescindiblemente expuestas en el auto que la disponga, por lo mismo, la falta de motivación
por parte de los tribunales de alzada no podrá ser justificada con el argumento de haberse
circunscrito a los puntos cuestionados de la resolución impugnada o que uno o varios de los
presupuestos de concurrencia para la detención preventiva no fueron impugnados por la o las
partes apelantes.

En tal sentido, el tribunal de alzada al momento de conocer y resolver recursos de apelación de la


resolución que disponga, modifique o rechace medidas cautelares, deberá precisar las razones y
elementos de convicción que sustentan su decisión de revocar las medidas sustitutivas y aplicar
la detención preventiva; expresando de manera motivada la concurrencia de los presupuestos
jurídicos exigidos para su procedencia, no pudiendo ser justificada su omisión por los límites
establecidos en el art. 398 del CPP.

III.4. Sobre la revisión de la interpretación de la legalidad ordinaria a través de la acción


de libertad

De otro lado, corresponde remitirse a lo sustentado tanto por las autoridades demandadas, como
por el Juez de garantías en sentido que el accionante no hubiere cumplido con los requisitos para
que se revise la interpretación de la legalidad ordinaria.

Al respecto, cabe precisar que si bien la jurisprudencia del Tribunal Constitucional ha


desarrollado dentro de las líneas de autorrestricción subreglas para que la jurisdicción
constitucional ingrese al análisis de la interpretación de la legalidad ordinaria, efectuada por los
jueces y tribunales, estableciendo la exigencia de que el accionante “…1. Explique por qué la
labor interpretativa impugnada resulta insuficientemente motivada, arbitraria, incongruente,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 490
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

absurda o ilógica o con error evidente, identificando, en su caso, las reglas de interpretación
que fueron omitidas por el órgano judicial o administrativo, y 2. Precise los derechos o
garantías constitucionales que fueron lesionados por el intérprete, estableciendo el nexo de
causalidad entre éstos y la interpretación impugnada; dado que sólo de esta manera la
problemática planteada por el recurrente, tendrá relevancia constitucional” (SC 0085/2006-R
de 25 de enero, entre otras); sin embargo, corresponde analizar si dicho entendimiento
jurisprudencial puede ser aplicado a la acción de libertad.

En esta perspectiva, resulta necesario recordar que la característica del informalismo constituye
un principio configurador de la naturaleza jurídica de la acción de libertad, entendido como la
ausencia de formalidades y rigorismos procesales que tiendan a enervar injustificadamente la
tramitación pronta y oportuna de esta acción tutelar, el mismo que guarda correspondencia con
las características de sumariedad e inmediatez propias de la acción de libertad, cuyas diversas
manifestaciones han sido desarrolladas por el constituyente, el legislador y la jurisprudencia
constitucional.

Así la SC 0017/2011-R de 17 de febrero, refiriéndose a las características que rodean a la acción


de libertad, estableció lo siguiente: “De manera coherente con las corrientes del Derecho
Constitucional contemporáneo y la visión plural orientada a la realidad nacional, el art. 125 de
la CPE, superó la denominación de 'hábeas corpus', prevista anteriormente por el art. 18 de la
Constitución Política del Estado abrogada CPEabrg, e instituyó la de 'acción de libertad',
configurándola como una garantía esencial que, además de la libertad, resguarda el derecho a
la vida como bien jurídico primario y fuente de los demás derechos del ser humano; sin
embargo, a pesar de ese cambio cualitativo, existen coincidencias substanciales, pues la
Constitución vigente mantiene las características esenciales del hábeas corpus: El
informalismo, por la ausencia de requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por la
urgencia en la protección de los derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite
caracterizado por su celeridad; la generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio,
inmunidad o prerrogativa, y la inmediación, porque se requiere que la autoridad judicial tenga
contacto con la persona privada de libertad.

Es importante resaltar que la Constitución Política del Estado vigente, en el marco más
amplio que implica la concepción de 'acción de libertad' y acorde al principio de
progresividad, acentúa algunas de las características anotadas; así por ejemplo, en el caso del
informalismo, contempla la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, antes
reservada sólo a los supuestos en que la persona fuera menor de edad, incapacitada,
analfabeta o notoriamente pobre; en el caso de la inmediación, además de establecer que la
autoridad judicial dispondrá que el accionante sea conducido a su presencia, prevé la
posibilidad de que ésta acuda al lugar de detención” (las negrillas nos pertenecen).

En efecto, bajo el principio configurador del informalismo, la acción de libertad puede ser
presentada en forma verbal o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre sin necesidad de poder
de representación y sin ninguna formalidad procesal, quedando liberadas las exigencias de
argumentación jurídica en cuanto a los derechos considerados lesionados o respecto de la
identificación de las normas conculcadas por los actos u omisiones denunciados, todo ello con la
finalidad de otorgar una protección inmediata y oportuna a los derechos objeto de protección.

En virtud de él, ni el constituyente ni el legislador -art. 67 de la LTCP- han establecido


requisitos formales o de contenido para la presentación de la demanda de acción de libertad que
tengan que ser cumplidos para su activación, inclusive bajo este principio, conforme reconoció
la jurisprudencia constitucional contenida en las SSCC 0304/2001-R, 0454/2001-R, 0294/2003-
R y 1204/2003-R, el juez o tribunal de garantías debía salvar los defectos u omisiones de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 491
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derecho advertidos en la demanda y pronunciarse de oficio sobre actos ilegales, derechos y


garantías conexos a los hechos denunciados. Así, la SC 1204/2003-R de 25 de agosto, estableció
lo siguiente: “Que, en materia de hábeas corpus, dada la naturaleza de los derechos bajo su
protección, le está permitido a la jurisdicción constitucional en una correcta aplicación de la
justicia constitucional no sólo limitarse a compulsar la violación de las normas que citara el
recurrente como vulneradas, sino también de otras que a consecuencia de aquéllas y
principalmente del hecho o acto que se refiere como constitutivo de la lesión resultan también
vulneradas, lo que bajo ningún motivo, puede interpretarse como resolver la problemática en
base a presupuestos distintos a los que hubiera referido el recurrente, pues se reitera que lo
dicho, se refiere únicamente a hechos conexos, vale decir que de esta compulsa se determinarán
otras acciones que impliquen lesión al derecho a la libertad en cualquiera de sus formas,
siempre que éstas derivaren o estén vinculadas con la denuncia”.

Otra de las manifestaciones del informalismo se desprende de lo previsto en el art. 68.2 de la


Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional LTCP, cuando señala que: “…la autoridad
competente podrá ordenar a quien tenga en su poder la remisión de actuados concernientes al
hecho demandado”, otorgando la facultad al tribunal de garantías de pedir todo elemento
probatorio, independientemente del presentado por el accionante o por la autoridad o persona
demandada con la finalidad de encontrar la verdad material de los hechos denunciados.

Consecuentemente, bajo el principio del informalismo, por un lado, no podrán exigirse


presupuestos formales a ser cumplidos por el accionante para activar el ámbito de
protección de la acción de libertad; y de otro lado, tampoco podrá requerirse la
observancia al accionante de libertad, de entendimientos jurisprudenciales referidos a las
exigencias de carga argumentativa a ser cumplidas en la demanda u otros requisitos que
impliquen una carga procesal para activar este mecanismo procesal al no encontrarse la
acción de libertad sujeta a requisitos de admisibilidad. En tal sentido, los presupuestos
para la revisión de la legalidad ordinaria establecidos por la jurisprudencia constitucional
para la acción de amparo constitucional no pueden ser exigidos como presupuestos a ser
observados a quien demanda de acción de libertad, dado que dicha carga argumentativa
resulta adversa a su naturaleza. Un entendimiento contrario, implicaría adoptar una
interpretación restrictiva y limitativa de este mecanismo de protección desacorde a los
criterios de interpretación de los derechos humanos y a los mandatos previstos en los arts.
13.IV, 256.II y 410.II de la CPE.

El razonamiento precedente implica un cambio del entendimiento jurisprudencial asumido sobre


este extremo en la SC 0083/2010-R de 4 de mayo.

III.5. El caso que se examina

Realizado el marco jurisprudencial y normativo necesario para el análisis de la presente causa,


corresponde señalar que en el caso en examen consta que dentro del proceso penal seguido
contra el ahora accionante por el delito de estupro, el Ministerio Público y la víctima formularon
recurso de apelación incidental contra el Auto de 7 de diciembre de 2011, que impuso al
accionante medidas sustitutivas a la detención preventiva, en cuya apelación se solicitó la
revocatoria de las medidas sustitutivas y la aplicación de la detención preventiva del accionante.

Las autoridades ahora demandadas, por Auto de Vista de 10 de enero de 2012, declararon
procedentes las apelaciones presentadas y dispusieron la detención preventiva del accionante,
bajo los siguientes fundamentos: a) Los puntos apelados se refieren únicamente a los riesgos
procesales, ya que ninguna de las partes ha observado como punto controvertido o
cuestionado la posible participación o autoría del accionante; b) Si bien se ha presentado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 492
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

documentación que acredita que el accionante tienen un grupo familiar y actividad laboral;
empero, no se ha demostrado el vínculo de parentesco entre el imputado y la propietaria del
inmueble donde el imputado vive a título gratuito, situación que no desmerece la concurrencia
del riesgo de fuga; c) Con relación a los riesgos de obstaculización, existen elementos evidentes
que prueban que el accionante influyó e influye negativamente sobre la víctima, no sólo por su
minoridad sino también por su vulnerabilidad y sobretodo por la conducta agresiva que el
imputado ha desplegado respecto de la víctima, esto “de acuerdo a la entrevista policial que la
menor en varias oportunidades ha sido víctima de agresiones que ha superado el orden verbal
ingresando a la agresión física; versión que ha sido corroborada por las entrevistas informativas
policiales, como da cuenta el Sr. Freddy Richard Tapia Céspedes que también sostiene que
Freddy Rivera Vargas es una persona agresiva, lo que implica que el imputado influye y es
probable que influya negativamente sobre la víctima” (sic); d) No se toman en cuenta algunos
acercamientos posteriores señalados por el Ministerio Público al no existir prueba sobre ello; y,
e) Habiéndose probado la concurrencia de los presupuestos previstos en el art. 233 del CPP, no
puede aplicarse el principio de favorabilidad al imputado en desmedro de la protección de la
víctima menor de edad, máxime si la Ley 2033, sobre delitos contra la libertad sexual, impone la
obligación de proteger a la víctima con la finalidad de no ser objeto de presiones,
intimidaciones, amenazas, ni los testigos, ni su familia.

Del análisis de los fundamentos del Auto de Vista que dispuso la detención preventiva del
accionante, se constata que las Vocales demandadas, si bien determinaron la detención
preventiva a raíz de la solicitud formulada en apelación tanto por la víctima como por el
Ministerio Público, aspecto que demuestra que no es evidente que hubieren pronunciado una
Resolución ultra petita al disponer la detención preventiva, conforme denuncia el accionante;
sin embargo, las autoridades demandadas no han cumplido con la exigencia de fundamentar su
decisión de aplicar la medida cautelar de detención preventiva, exponiendo de manera motivada
la concurrencia de los presupuestos exigidos por los arts. 233, 234 y 235 del CPP, modificados
por la Ley 007, concretamente en lo que se refiere al grado de autoría y participación en la
comisión del delito imputado al accionante, limitándose a señalar que al no haber sido
cuestionado este aspecto por las partes procesales no cabía pronunciamiento alguno sobre el
particular, por lo que decidieron referirse únicamente a los riesgos procesales para fundamentar
su resolución, olvidando que la detención preventiva sólo puede ser ordenada previa verificación
de los elementos de prueba que permitan concluir la concurrencia de los dos presupuestos
establecidos en las normas procesales citadas, esto es la fundamentación expresa sobre los
elementos de convicción suficientes que permiten sostener con probabilidad que el imputado es
autor o partícipe del hecho punible y la existencia de uno o varios de los riesgos procesales de
fuga o de obstaculización, que justifiquen la necesidad de aplicar la detención preventiva y no
otra medida cautelar.

Consecuentemente, las autoridades ahora demandadas al momento de revocar las medidas


sustitutivas que le fueron impuestas al accionante, debieron fundamentar y justificar en derecho
sobre la concurrencia de ambos presupuestos; empero, ello no ocurrió, al constatarse la omisión
en la falta de fundamentación sobre el primer requisito previsto en el art. 233 del CPP,
limitándose a apoyar su decisión en la sola existencia de los riesgos procesales que a su juicio
determinaron la medida de aplicar la detención preventiva, porque en criterio suyo, estaban
exentas de motivar la concurrencia del primer requisito previsto por el art. 233 del mencionado
Código, en razón a que este presupuesto no fue cuestionado por las partes apelantes,
desconociendo que lo previsto en el art. 398 del CPP, no puede ser entendido en su literalidad,
sino que esta norma legal debe ser interpretada en forma integral y sistemática con la normativa
referida a las medidas cautelares, dado que tratándose concretamente de la detención preventiva,
esta última normativa no exime a los tribunales de alzada del deber de motivar el cumplimiento

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 493


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de las condiciones previstas para la aplicación de la detención preventiva, determinación que


sólo es válida cuando se han fundamentado los dos presupuestos de concurrencia.
Por lo expuesto, el Juez de garantías, al denegar la acción de libertad, no ha evaluado en forma
correcta los datos del proceso ni las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve:

1º REVOCAR la Resolución 01/12 de 13 de enero de 2012, cursante de fs. 100 a 104,


pronunciada por el Juez de Partido Liquidador y de Sentencia de la provincia de Quillacollo
del Distrito Judicial de Cochabamba, y en consecuencia CONCEDER la tutela solicitada
por el accionante, sin disponer su libertad.

2º Disponer la nulidad del Auto de Vista de 10 de enero de 2012, pronunciado por las Vocales
demandadas, debiendo pronunciar nueva resolución conforme a los entendimientos asumidos en
esta Sentencia.

3º Al plasmar esta Sentencia un cambio jurisprudencial, se ordena su difusión por Secretaría


General a las Salas de este Tribunal y a los jueces y tribunales de garantías.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0079/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad:
Expediente: 00162-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 02/2012 de 7 de febrero, cursante de fs. 95 vta a 102 vta., pronunciada,
dentro de la acción de libertad, interpuesta por Ciriaco Guarayo Gabriel contra Olvis Egüez
Oliva, Fiscal de Materia de la localidad de La Guardia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 6 de febrero de 2012, cursante de fs. 14 a 17 vta., el accionante, expone
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 494


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Mediante contrato de compra venta suscrito el 31 de enero de 2012, adquirió un bien inmueble
rústico ubicado en el Cantón “El Carmen” y/o 16 de Julio, kilómetro 9-Doble Vía a La Guardia,
zona Sur Oeste, con una superficie de 8000. 00 m2, inscrito en Derechos Reales (DDRR) bajo la
matrícula computarizada Nº 7011060102784 de 7 de abril de 2011. El 2 de febrero de ese año, a
horas 08:00 a.m., juntamente con Ana Gloria Villa Mancilla, vendedora, se constituyeron en el
inmueble para que le hiciera entrega física de la posesión quieta y pacífica; inmediatamente
procedió a limpiar la maleza e inició la construcción de una habitación precaria para su vivienda y
una barda para evitar que terceras personas ingresen al inmueble. Empero, al promediar las 12:00
del mismo día, se presentó Daniel Alfonso Vidal Rosado y su hijo Ronny Vidal, supuestamente a
nombre de Mary Miranda de Rosado, presunta propietaria del mismo inmueble; producida una
discusión los condujeron a la Comisaría Policial del km. 9 de la Doble Vía a La Guardia-Barrio El
Carmen, no habiendo Ronny Vidal, acreditado derecho propietario alguno, agredió físicamente a
Ariel Camacho, acompañante de Ana Gloria Villa Mancilla.

Refiere que el 26 de enero de 2012, Ana Gloria Villa Mancilla, realizó una denuncia por
avasallamiento, asociación delictuosa y otros, contra Mario Vedia, Agustín Cancaviri, Inés
Murillo, Greta Vda. de Palacios, Eulogia Cuéllar, Manrique Fajardo Ilarion, Román Ayala y otros,
cuyo inicio de investigación penal se realizó el 27 de ese mes y año ante la Jueza de Instrucción en
lo Penal de la localidad de La Guardia; denuncia ratificada el 3 de febrero del mismo año. No
obstante, el 3 de febrero de igual año, Danny David Herbas Fernández, comprador de un lote de
terreno de los esposos Daniel Alfonso Vidal Rosado y Mary Miranda de Vidal, formalizó denuncia
contra su persona por el delito de allanamiento y asociación delictuosa ante la Fuerza Especial de
Lucha Contra el Crimen (FELCC) de esa localidad, aduciendo que juntamente a otros
“malvivientes” tomaron posesión de manera violenta de su inmueble rústico y agredieron
físicamente a sus hijos.

Agrega, que pese a encontrarse ambas investigaciones bajo conocimiento del fiscal demandado, el
3 de febrero de 2012, requirió al Comandante Departamental de Policía, asigne un contingente
policial para su aprehensión por flagrancia, dentro de la investigación iniciada a denuncia de
Danny David Herbas Fernández; mandamiento del que tomó conocimiento a través de sus vecinos
el 5 de ese mes y año. Constituyendo ello una persecución ilegal, dado que el 6 de igual mes y año,
a horas 09:00, un policía se constituyó en su lote de terreno a citarlo para que se presente en la
FELCC a prestar su declaración informativa.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Alega la vulneración de sus derechos a la libertad personal, a la locomoción, a la defensa, a la


igualdad, a la presunción de inocencia y a la “seguridad jurídica”, citando al efecto los arts. 22,
23.I, 24, 115, 117.I y 119 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con estos antecedentes, el accionante solicita se conceda la acción de libertad; disponiendo: a) Se


deje sin efecto el requerimiento fiscal de 3 de febrero de 2012; b) Se ordene a la Comandante
Departamental de Policía el cese de la persecución indebida; c) Su citación conforme a ley; d) La
suspensión del cumplimiento del referido requerimiento fiscal por parte de la Comandante
Departamental de Policía; y, e) La emisión de informe sobre la denuncia de 2 del citado mes y año,
formulada por Ariel Camacho contra Daniel Alfonso Vidal Rosado y Ronny Vidal Miranda, por
parte del Comisario Sgto. Orlando Toledo de la Comisaría de la Policía Km. 9 Barrio El Carmen.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 495


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Celebrada la audiencia pública el 7 de febrero de 2012, en presencia del accionante asistido por su
abogado y el fiscal demandado, según consta en el acta cursante de fs. 93 a 95 vta., se produjeron
los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado del accionante, ratificó el contenido íntegro de la acción presentada y la amplió,


indicando: 1) La existencia de dos denuncias por allanamiento y asociación delictuosa, denotan la
existencia de controversia o litigio sobre el inmueble, por lo que no debió expedirse el
mandamiento de aprehensión; 2) Si el fiscal consideraba que el delito era grave, debió aplicar lo
establecido por el art. 226 del Código de Procedimiento Penal (CPP) y fundamentar su
requerimiento; al no hacerlo, implica que es ilegal, por no existir flagrancia conforme los requisitos
previstos en el art. 300 del citado cuerpo legal; 3) La citación a su defendido se efectúo con
posterioridad a la emisión del mandamiento de aprehensión, situación que se evidencia por las
fotografías de los policías que fueron a buscar a su cliente al terreno para dicho efecto, como si se
tratara de un delito en flagrancia; 4) Se debió aplicar otro procedimiento, en razón a que los arts.
132 y 298 del Código Penal (CP), prevén los delitos de allanamiento y asociación delictuosa, cuya
pena mínima no excede de dos años; 5) El requerimiento fiscal hace referencia a la amenaza latente
contra la vida e integridad física; empero, no existe certificado médico forense que acredite dicho
extremo, lo que advierte su ilegalidad y emisión parcializada; y, 6) Reiteró su petitorio.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Olvis Egüez Oliva, fiscal de materia demandado, no presentó informe escrito y en la audiencia,
manifestó: i) En el requerimiento de 3 de febrero de 2012, solicitó colaboración a la Comandante
Departamental de Policía, para hacer efectiva una aprehensión, por tratarse de un delito
permanente y estar latente la flagrancia, por encontrarse el accionante en el interior del inmueble;
ii) Con relación a la flagrancia, la SC 1845/2004-R, precisó que debe existir la inmediatividad y la
evidencia física; en el caso concreto, al emitir el requerimiento fiscal, se observó la cuasi
flagrancia, dado que inmediatamente después de consumado el hecho delictivo, mientras sigue la
persecución se aprehende al supuesto autor y la evidencia física es sustituida por la simultaneidad y
razonabilidad; iii) Con la finalidad de dar cumplimiento al art. 227 inc. 1 y lo establecido por el art.
230 del CPP, teniendo conocimiento de un hecho flagrante y la amenaza latente contra la
integridad física y la vida de los propietarios, con la finalidad de evitar mayores hechos delictivos,
se emitió el oficio a la Comandante Departamental de Policía; iv) En base a los antecedentes de la
investigación, en el informe se indicó que el 1 de febrero del citado año, un grupo de personas no
identificadas que manejaban a dos docenas de malvivientes, cortando alambres de forma violenta
ingresó al predio ubicado en el Kilómetro 9 de la Doble Vía La Guardia, ingresando por la Av.
Gualberto Villarroel al inmueble que se encuentra en la UV. 210, de propiedad de los esposos
Daniel Alfonso Vidal Rosado y Mary Miranda de Vidal introduciendo material de construcción y
ladrillos; v) En cumplimiento a lo establecido por la SC 1855/2004 y los arts. 230 y 277 inc. 1) del
CPP, solicitó cooperación a la Comandante Departamental de Policía, para que intervengan y
evidencien la existencia o no de un hecho flagrante; vi) Previo a presentar la acción de libertad, el
accionante debió cumplir cierto requisitos de subsidiariedad excepcional conforme lo estableció la
SC 160/2005 de 23 de febrero, relativa a que el Juez encargado del control jurisdiccional es el
encargado del resguardo de los derechos vulnerados durante la investigación, razonamiento
reiterado por las SSCC 0008/2010-R y 0067/2010-R; vii) Los arts. 167 y 169 inc. 3) del CPP,
prevén la interposición del incidente de nulidad por defectos absolutos cuando se advierta la
vulneración de un derechos o garantías constitucionales; viii) El accionante dio por vulnerado su
derecho a la libertad de locomoción, sin que previamente se le hubiere privado del mismo; al
respecto la SC 451/2010-R de 28 de junio, refiere que la protección de la acción de libertad no se
activa cuando hubiere cesado la restricción; por cuanto, corresponde denegar la tutela solicitada;
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 496
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ix) La SC 1949/2011-R, citada por el accionante, se refiere a otro supuesto fáctico; y, x) Solicitó se
deniegue la tutela invocada, por carecer de fundamentos legales.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez Octavo de Sentencia del Tribunal Departamental de Santa Cruz,
constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 02/12 de 7 de febrero de 2012, cursante
de fs. 95 vta; a 102 vta., denegó la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: a) La acción
de libertad se constituye en el medio idóneo, eficaz e inmediato para restablecer los derechos
vulnerados, con la finalidad de restituir las formalidades legales, el derecho a la libertad y el cese
de la persecución o procesamiento ilegal o indebido; b) La SC 0080/2010-R, estableció subreglas
de subsidiariedad excepcional en materia penal por las que no es posible ingresar al análisis de
fondo de la problemática y circunstancias en las cuales es posible prescindir de dichos
presupuestos; c) Respecto del procesamiento indebido la SC 0895/2010-R de 10 de agosto,
estableció que la protección que brinda esta acción no abarca todas las formas en que el debido
proceso puede ser infringido, sino sólo los supuestos en los que está directamente vinculado con la
libertad o exista absoluto estado de indefensión; d) El accionante debió acudir ante el Juez
contralor de garantías constitucionales, denunciando las presuntas lesiones a sus derechos; al no
hacerlo, resulta aplicable el primer supuesto de subsidiariedad excepcional; e) Es necesario
remarcar que la primera condición que debe concurrir para activar esta acción, es que el acto lesivo
o las amenazas de la autoridad pública denunciados, deben estar vinculados con la libertad por
operar como causa directa para su restricción o supresión; f) De los datos del expediente se
evidencia que los actos relatados tienen relación con la restricción a la libertad, por concurrir el
primer requisito establecido por la jurisprudencia; por cuanto, no es posible que el fiscal requiera y
base su fundamento de aprehensión en flagrancia contra el accionante, aspecto que denota
procesamiento indebido, puesto que sólo la policía o una persona particular podrá aprehender a
otra sorprendida en la comisión de un delito en flagrancia según establecen los arts. 227 y 230 del
CPP y el art. 25 de la CPE; g) No existe absoluto estado de indefensión, debido a que el
accionante, indicó que interpuso denuncia ante la FELCC de La Guardia y que tiene conocimiento
de los actuados del proceso seguido en su contra; y, h) El problema planteado no se encuentra
dentro de las previsiones y alcances de la acción de libertad.

II. CONCLUSIONES

Realizada la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. El 27 de enero de 2012, el fiscal demandado, dio aviso de inicio de investigación ante la Jueza
Mixto de Instrucción de La Guardia, informando que el 26 de ese mes y año, Ana Gloria Villa
Mancilla denunció la presunta comisión de los delitos de allanamiento de domicilio, asociación
delictuosa y otros contra Mario Vedia, Agustín Cancaviri, Inés Murillo, Greta Vda. De Palacios,
Eulogia Cuellar, Manrique Fajardo Ilarion, Román Ayala y otros (fs. 78).

II.2. A fs. 71 de obrados, cursa informe de inicio de investigación de 3 de febrero de 2012,


realizado por el fiscal demandado, ante la Jueza Mixto de Instrucción de La Guardia, haciendo
conocer la denuncia de esa fecha interpuesta por Danny David Hervas Fernández contra
“SILLACO YUARACO GABRIEL” (sic) por la presunta comisión del delito de allanamiento de
domicilio y otros.

II.3. Dentro de la investigación instaurada; a denuncia de Danny David Herbas Fernández contra
Ciriaco Guarayo Gabriel y otros, por la presunta comisión de los delitos de allanamiento de
domicilio y asociación delictuosa, el 3 de febrero de 2012, al amparo de los arts. 137 y 218 del
CPP y 16 de la Ley 2175 “Ley Orgánica del Ministerio Público” (LOMP), el fiscal demandado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 497
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

requirió a la Comandante Departamental de Policía de Santa Cruz de la Sierra, la


intervención de efectivos policiales en un hecho flagrante de allanamiento y asociación
delictuosa, a efectos que se cumpla lo establecido en el art. 227 inc. 1) del CPP y sean
remitidos ante el Ministerio Público con jurisdicción en la localidad de La Guardia. En el
cual, realizó una síntesis de los hechos ocurridos el 1 del citado mes y año, refiriendo la existencia
de un hecho flagrante, la amenaza latente contra la integridad física y la vida de los propietarios,
con la finalidad de evitar hechos delictivos (fs. 7).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia encontrarse ilegalmente perseguido por orden del fiscal de materia de la
localidad de La Guardia, quien pese a conocer de la apertura de dos investigaciones por los delitos
de allanamiento de domicilio y asociación delictuosa sobre el mismo inmueble, el primero a
denuncia de su vendedora y el segundo instaurado en su contra y no habiéndolo citado
previamente, emitió mandamiento de aprehensión en su contra, refiriendo la existencia de un hecho
flagrante, medida que encomendó al Comando Departamental de Policía. Por consiguiente,
corresponde analizar, en revisión si tales extremos son evidentes y si constituyen actos lesivos a los
derechos a la libertad personal, a la locomoción, a la defensa, a la igualdad, a la presunción de
inocencia y a la “seguridad jurídica”, a efectos de conceder o no la tutela reconocida por la acción
de libertad.

III.1. Alcance y finalidad de la acción de libertad

El alcance de este medio de defensa, está en el art. 125 de la norma fundamental, al instituirlo
como medio idóneo, oportuno y eficaz que resguarda la protección de los derechos a la vida y la
libertad, cuando a través de actos ilegales u omisiones indebidas de autoridades públicas o
particulares se coloque en peligro la vida, se restrinja o amenace la libertad. Dada la naturaleza de
los referidos derechos, la finalidad de esta garantía constitucional de carácter jurisdiccional, es
resguardar la vida, restablecer las formalidades legales, el cese de la persecución ilegal o indebida
y la restitución del derecho a la libertad.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

La protección que brinda este medio de defensa a diferencia de otras acciones, no se rige por el
principio de subsidiariedad, por ser una garantía idónea, oportuna e inmediata contra los actos
que lesionen el derecho a la libertad -física o de locomoción- a objeto de restablecerlo; sea, a
través de su restitución, el cese de la persecución ilegal o indebida y/o el restablecimiento de las
formalidades legales.

Empero, la jurisprudencia de este Tribunal a través de la SC 0008/2010-R de 6 de abril, precisó


el uso previo de medios legales idóneos, oportunos y eficientes para el restablecimiento del
derecho conculcado; y sólo ante la persistencia de la lesión, se puede acudir a la jurisdicción
constitucional a través de la presente acción. Siguiendo la misma línea, la SC 0080/2010-R de 3
de mayo, se refirió a las situaciones excepcionales en las que a través de la acción de libertad, no
es posible ingresar al análisis de fondo del problema jurídico planteado, instituyendo tres
supuestos de improcedencia, para el caso en revisión, corresponde referirnos al primer supuesto:
“Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía cometieron
arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía no
existe aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez Cautelar
de turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el
aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante
ella donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 498
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a través
del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en el
control de la investigación” (lo resaltado nos pertenece).

III.3. Análisis del caso concreto

En la problemática planteada, el accionante refiere encontrarse ilegalmente perseguido a


consecuencia de la emisión del requerimiento fiscal de 3 de febrero de 2012, por parte del fiscal
demandado a la Comandante Departamental de Policía, en el cual solicita la cooperación de
efectivos policiales para que procedan a dar cumplimiento a lo establecido en el art. 227 inc. 1)
del CPP y que las personas aprehendidas sean remitidas ante el Ministerio Público con
jurisdicción en la localidad de La Guardia. De las conclusiones formuladas en la presente
Sentencia Constitucional, se advierte la existencia de dos investigaciones por la presunta
comisión de los delitos de allanamiento de domicilio y asociación delictuosa, ambas de
conocimiento del fiscal demandado, cuyos inicios de investigación se informaron en su
oportunidad ante el Juez Mixto de Instrucción en lo Penal de la indicada localidad (Conclusiones
II.1 y II.2). En memorial de acción de libertad el accionante, manifestó que el 5 de febrero de
2012, tomó conocimiento del requerimiento fiscal que presuntamente ordenó su aprehensión así
como de la investigación abierta en su contra a denuncia de Danny David Herbas Fernández.

Bajo ese contexto y teniendo presente que la acción de libertad, como medio idóneo, oportuno y
eficaz para restablecer las lesiones al citado derecho, por disposición constitucional no tiene
naturaleza subsidiaria; empero, vía jurisprudencia constitucional, se estableció que ante la
existencia de medios ordinarios idóneos que cumplan la misma finalidad, los mismos deben ser
previamente agotados y sólo ante la persistencia de la lesión se podrá activar la protección que
brinda esta acción. En ese sentido, dada la existencia de una investigación contra el accionante
por la presunta comisión del delito de allanamiento de domicilio y asociación delictuosa, cuyo
aviso de inicio de investigación se realizó ante la Jueza Mixto de Instrucción en lo Penal, el 3 de
febrero de 2012, correspondía que el accionante, acuda ante esa autoridad, como contralora del
respeto de los derechos fundamentales y garantías constitucionales de las partes durante la
investigación preliminar o fase preparatoria, para denunciar las presuntas arbitrariedades en que
incurrió el representante del Ministerio Público demandado, a objeto que repare la presunta
lesión a los derechos invocados en la presente acción.

En consecuencia, el Juez de garantías, al haber denegado la tutela solicitada, obró correctamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia,
de conformidad con el art. 12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve: DENEGAR la tutela solicitada,
con la aclaración que no se ingresó al análisis de fondo.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 499


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0080/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00144-2012-01-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 37-A/2012 de 10 de febrero, corriente de fs. 42 a 44, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Ayda Choque Orellana contra
Ismael Jonathan Ramírez Condori y Mónica Castillo, Director y Presidenta de la Junta
Escolar, ambos de la Unidad Educativa Pública de Convenio de la Fuerza Aérea Boliviana
“Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III” de la ciudad de El Alto.

I.ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 7 de febrero de 2012, cursante de fs. 13 a 15, la accionante


señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Al inicio de la gestión escolar 2012, decidió inscribir a su hija A.A., en la Unidad Educativa
Pública de Convenio de la Fuerza Aérea Boliviana “Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III” de la ciudad
de El Alto, esto a razón de la proximidad del citado establecimiento escolar a su domicilio, a
cuyo efecto a partir del 2 de enero del mencionado año, realizó largas filas de día y noche,
procurando garantizar una plaza para su hija en el referido centro educativo.

El 25 del mes y año señalados, personal de la mencionada Unidad Educativa, procedió a recoger
los fólderes que contenían toda la documentación exigida a los postulantes, dando así
cumplimiento con una de las etapas del proceso de inscripción, formalidad que derivó en que el
nombre de su hija fuera publicado dos días después, en la “Lista Oficial de Admitidos” (sic),
documento que fue firmado por el Director, Ismael Jonathan Ramírez Condori, llevando el sello
del establecimiento; sin embargo, “extrañamente”, a la media hora de su publicación, la referida
lista fue retirada y luego de dos horas se publicó una segunda lista, en la cual el nombre de su
hija no figuraba, exclusión que fue efectuada sin justificación alguna, además que ésta no se
hallaba firmada por el Director y no contaba con el sello de la Unidad Educativa, consignando
únicamente un otro sello correspondiente a la Junta Escolar.

Refiere que, intentó en varias oportunidades entrevistarse con el Director de la Unidad


Educativa, para efectuar el reclamo correspondiente, sin que haya podido lograr su cometido,
razón por la cuál acudió ante la representante de la Junta Escolar, Mónica Castillo, quien le
manifestó su optimismo frente al problema y expresándole que con toda seguridad se encontraría
solución al mismo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 500


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Preocupada por la situación, acudió los siguientes días al establecimiento, sin que hasta la fecha de
iniciación de las clases se haya materializado la inscripción solicitada, con el grave perjuicio que el
hecho representa para la educación de su hija.

Agrega que, la justificación expresada por las autoridades ahora accionadas se halla relacionada
con el hecho que no existirían los “cupos” suficientes para inscribir a su hija, argumento que no
tiene sustento, por cuanto su persona realizó todas las acciones necesarias, conducentes a lograr
que la inscripción efectivamente se concrete.

I.1.2. Derecho y garantía supuestamente vulnerados

Ayda Choque Orellana, alega la lesión del derecho de su hija a la educación y la “garantía de la
igualdad” citando al efecto el art. 17 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicito se conceda la acción y ordene la inscripción inmediata de su hija al citado centro


educativo.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 10 de febrero de 2012, conforme consta en el acta de fs. 36 a


41 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante ratificó plenamente el contenido de su acción, aclarando los presupuestos


fácticos y el petitorio, citando las mismas normas supuestamente vulneradas, añadiendo que no
es aplicable el principio de subsidiaridad al caso, por cuanto la gestión escolar se halla en curso
y en caso de agotarse la fase previa de impugnación, el daño a la educación de la niña sería
irreparable.

I.2.2. Informe de las personas demandadas

Ismael Jonathan Ramírez Condori en audiencia manifestó: 1) Al ser un centro educativo de convenio,
la Unidad Educativa “Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III”, cuenta con un Director General de profesión
militar, que en el presente caso autorizó a la Presidenta de la Junta Escolar, ahora demandada, el
recojo de los fólderes que contienen la documentación de los alumnos postulantes, dirigente que llegó
a influir en la elaboración de las listas y en la toma de otras decisiones institucionales, derivando en
definitiva en el hecho que su persona haya sido desautorizada; 2) Evidentemente, existieron manejos
inadecuados de las listas de estudiantes admitidos, por parte de Mónica Castillo y de la Junta Escolar,
hechos anómalos en los cuales aparentemente inclusive hubieron cobros indebidos para viabilizar
inscripciones; y, 3) El centro educativo no cuenta con la infraestructura suficiente para albergar más
alumnado, llegándose inclusive al extremo de que los estudiantes pasen clases de pie, hecho que
impide la aceptación de un cupo mayor de escolares al de 70 alumnos por aula.

I.2.3. Resolución

El Juez Tercero de Partido y de Sentencia de El Alto del Distrito Judicial de La Paz, constituido
en Juez de garantías, pronunció la Resolución 37-A/2012 de 10 de febrero, por la cual concedió
la tutela disponiendo, la inscripción de la alumna A.A. en el nivel inicial de la Unidad Educativa
Rafael Pabón III, puesto que no existe una lista definitiva de alumnos admitidos; invocando a las
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 501
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

autoridades a promover y gestionar la apertura y creación de un nuevo paralelo a nivel inicial,


debiendo considerarse también la posibilidad de habilitación de otros ambientes o aulas de la
citada unidad educativa, en base a los siguientes fundamentos de orden legal: i) El proceso de
inscripción de alumnos en la Unidad Educativa “Rafael Pabón III”, fue objeto de un manejo
discrecional, toda vez que existió la intervención de miembros de la Junta Escolar y por otro
lado también hubo participación e injerencia de la llamada Comisión Revisora y del Director
General; ii) El manejo desprolijo de las listas de alumnos admitidos y que el propio Director
demandado reconoce, derivó en un perjuicio evidente para la hija de la accionante, vulnerándose
su derecho a la educación, dejándola en un estado de incertidumbre al no poder asistir a clases
regularmente; y, iii) La educación al ser un fin del Estado debe materializarse más allá de los
postulados constitucionales, debiendo en el presente caso las autoridades analizar la posibilidad
de apertura de un nuevo curso a nivel inicial, facilitando el acceso y el uso de la infraestructura
de la Unidad Educativa Pública de Convenio de la Fuerza Aérea Boliviana “Tcnl. Rafael Pabón
III”.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. El 5 de febrero de 2012, Miguel Ángel Cordero Patón, Presidente del Comité Electoral de
la zona Ferropetrol, emitió certificación respecto a que la familia Guarachi Choque, son
“vecinos residentes” en la referida zona (fs. 4).

II.2. A fs. 7, 9 y 11, cursan declaraciones juradas ante Notario de Fe Pública de Primera Clase
15, de la ciudad de EL Alto, efectuadas por Ysmael Huanca Quenta, Eustaquio Flores Fernández
y Yolanda Arteaga de Céspedes, respecto a que el nombre de la hija de la accionante fue
excluido de la lista inicial de alumnos admitidos, no figurando en la segunda lista publicada
horas después.

II.3. A fs. 33 del expediente se encuentra fotocopia simple de la “Nómina Oficial de Estudiantes
aceptados del Nivel Inicial de la Unidad Educativa 'Tcnl. Av. Rafael Pabón Cueva III Gestión
2012'” (sic), en la cual se halla el nombre de la hija de la demandante en la ubicación signada
con el número 42, a fs. 35 existe una segunda lista en fotocopia simple, en la cuál el nombre de
la hija de la demandante no figura.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La demandante, considera que fueron vulnerados el derecho a la educación y la garantía a la


igualdad de su hija, debido a que no obstante de haber efectuado todos los actos conducentes a la
inscripción de la misma en la Unidad Educativa “Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III” de las ciudad
de El Alto, correspondiente a la gestión 2012, el nombre de la niña fue excluido de la lista
definitiva de alumnos admitidos, sin tomar en cuenta que en la primera lista publicada si se
hallaba consignada, hecho que derivó en un estado de absoluta incertidumbre y en un evidente
perjuicio para su formación escolar. En consecuencia, se procederá a analizar si en el presente
caso corresponde la concesión o no de la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional. Su configuración constitucional

El orden constitucional boliviano, dentro de las acciones de defensa, instituye en el art. 128 la
acción de amparo constitucional como un mecanismo de defensa que tendrá lugar contra los
“actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 502
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley”.

Del contenido del texto constitucional de referencia puede inferirse que la acción de amparo
constitucional es un mecanismo de defensa jurisdiccional, eficaz, rápido e inmediato de
protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, cuyo ámbito de
protección se circunscribe respecto de aquellos derechos fundamentales y garantías que no se
encuentran resguardados por los otros mecanismos de protección especializada que el mismo
orden constitucional brinda a los bolivianos, como la acción de libertad, de protección, de
privacidad, popular, de cumplimiento, etc. Asimismo, desde el ámbito de los actos contra los
que procede, esta acción se dirige contra aquellos actos y omisiones ilegales o indebidos
provenientes no sólo de los servidores públicos sino también de las personas individuales o
colectivas que restrinjan o amenacen restringir los derechos y garantías objeto de su protección.
En este contexto, el amparo constitucional boliviano en su dimensión procesal, se encuentra
concebido como una acción que otorga a la persona la facultad de activar la justicia
constitucional en defensa de sus derechos fundamentales y garantías constitucionales, frente a
los actos u omisiones ilegales provenientes de los servidores públicos o particulares.

El término de acción no debe ser entendido como un simple cambio de nomenclatura, que no
incide en su naturaleza jurídica, pues se trata de una verdadera acción de defensa inmediata,
oportuna y eficaz para la reparación y restablecimiento de los derechos y garantías
fundamentales, y dada su configuración, el amparo constitucional se constituye en un proceso
constitucional, de carácter autónomo e independiente con partes procesales diferentes a las del
proceso ordinario o por lo menos con una postura procesal distinta, con un objeto específico y
diferente, cual es la protección y restitución de derechos fundamentales y con una causa distinta
a la proveniente del proceso ordinario, esto es, la vulneración concreta o inminente de derechos
fundamentales a raíz de actos y omisiones ilegales o indebidos y con un régimen jurídico
procesal propio.

En este orden de ideas, la acción de amparo constitucional adquiere las características de


sumariedad e inmediatez en la protección, por ser un procedimiento rápido, sencillo y sin
ritualismos dilatorios. A estas características se añade la de generalidad, a través de la cual la
acción puede ser presentada sin excepción contra todo servidor público o persona individual o
colectiva.

Finalmente cabe señalar que dentro de los principios procesales configuradores del amparo
constitucional, el constituyente resalta la inmediatez y subsidiariedad al señalar en el art. 129.I
de la CPE que esta acción: “…se interpondrá siempre que no exista otro medio o recurso legal
para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados”.

Lo señalado, implica que la acción de amparo forma parte del control reforzado de
constitucionalidad o control tutelar de los derechos y garantías al constituirse en un mecanismo
constitucional inmediato de carácter preventivo y reparador destinado a lograr la vigencia y
respeto de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, siempre que no exista otro
medio de protección o cuando las vías idóneas pertinentes una vez agotadas no han restablecido
el derecho lesionado, lo que significa que de no cumplirse con este requisito, no se puede
analizar el fondo del problema planteado y, por tanto, tampoco otorgar la tutela.

III.2. El derecho a la igualdad y su multidimensionalidad jurídica constitucional

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 503


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El preámbulo de la Constitución Política del Estado promulgada el 7 de febrero de 2009,


señala:”…construimos un nuevo Estado. Un Estado basado en el respeto e igualdad entre
todos...”.

La arquitectura jurídica e institucional de un Estado de Derecho, se fundamenta en los valores elegidos


como sociedad, tales como la igualdad y la no discriminación entre otros. La comunidad entiende que
necesita proteger, reforzar y profundizar los valores, mismos que evolucionan permanentemente a la par
de la mutación permanente de las circunstancias y retos, con los cuales el ser colectivo se va
enfrentando. La igualdad, por tanto es un valor guía y eje del todo colectivo, que se halla reconocido en
el art. 8.II de la CPE, cuando señala: “El Estado se sustenta en los valores de unidad, igualdad…”.

La Constitución Política del Estado considera a la igualdad, no únicamente como un valor


supremo, sino también como un principio motor de todo el aparato jurídico, siempre en
procura del logro de un régimen de igualdad real, donde no se reconozcan privilegios y se
erradique toda forma de discriminación, consolidando los rasgos e impronta de nuestro nuevo
modelo de Estado. Carlos Bernal Pulido al referirse a la igualdad como un principio ha
señalado: "este principio impone al Estado el deber de tratar a los individuos de tal modo que
las cargas y las ventajas sociales se distribuyan equitativamente entre ellos (…) como derecho
la igualdad atribuye al individuo (el sujeto activo) el derecho de exigir del Estado o de los
particulares (el sujeto pasivo) el cumplimiento de los mandatos que se derivan del principio
de igualdad". “El principio de igualdad (…), en su doble vertiente de igualdad de trato y de no
discriminación, se proyecta, como ya tuvimos oportunidad de decir, sobre todos los poderes
públicos, operando por ello mismo en dos planos distintos: igualdad en la ley e igualdad en la
aplicación de la ley (…)”.

La igualdad, además de ser un valor y un principio, es también un derecho y una garantía. Es un


derecho que a su vez reivindica el derecho a la diferencia y es una garantía porque avala su
ejercicio activando la tutela judicial y constitucional en caso de su violación.

“Igualdad, como Garantía individual es un elemento consubstancial al sujeto en su situación de


persona humana frente a sus semejantes todos… es una situación en que está colocado todo
hombre desde que nace”.

La Declaración de los Derechos Universales del Hombre proclama que: "Todos los seres
humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y
conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros".

III.3. El derecho a la educación en la Constitución Política del Estado

La Constitución Política del Estado, en cuanto al derecho a la educación en su art. 9.5 dispone
que es fin del Estado: “El garantizar el acceso de las personas a la educación, a la salud y al
trabajo” (negrillas agregadas), y los arts. 13.I de la Norma Fundamental, señala: “Los derechos
reconocidos por esta Constitución son inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y
progresivos. El Estado tiene el deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos” y el 14.III,
establece: “El Estado garantiza a todas las personas y colectividades, sin discriminación alguna,
el libre y eficaz ejercicio de los derechos establecidos en esta Constitución, las leyes y los
tratados internacionales de derechos humanos”.

El art. 59.V de la CPE, establece: “El Estado y la sociedad garantizarán la protección,


promoción y activa participación de las jóvenes y los jóvenes en el desarrollo productivo,
político, social, económico y cultural, sin discriminación alguna, de acuerdo con la ley”, para
luego en el art. 77 disponer: “La educación constituye una función suprema y primera
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 504
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

responsabilidad financiera del Estado, que tiene la obligación indeclinable de sostenerla,


garantizarla y gestionarla”, señalando finalmente en el art. 82 que: “El Estado garantizará el
acceso a la educación y la permanencia de todas las ciudadanas y los ciudadanos en condiciones
de plena igualdad” (las negrillas nos corresponden).

El derecho a la educación es reconocido por todos los instrumentos jurídicos internacionales en


materia de derechos humanos, principalmente por la Declaración Universal de los Derechos
Humanos, el Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, la
Declaración Americana de Derechos del Hombre y la Convención sobre los Derechos del Niño.

El art. 13.1 del Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
recogiendo el art. 26.2 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, señala que: “Los
Estados Partes en el presente Pacto reconocen el derecho de toda persona a la educación.
Convienen en que la educación debe orientarse hacia el pleno desarrollo de la personalidad
humana y del sentido de su dignidad, y debe fortalecer el respeto por los derechos humanos y las
libertades fundamentales. Convienen asimismo en que la educación debe capacitar a todas las
personas para participar efectivamente en una sociedad libre, favorecer la comprensión, la
tolerancia y la amistad entre todas las naciones y entre todos los grupos raciales, étnicos o
religiosos, y promover las actividades de las Naciones Unidas en pro del mantenimiento de la
paz.”

El art. 12 de la Declaración Americana de Derechos del Hombre establece: “Toda persona tiene
derecho a la educación, la que debe estar inspirada en los principios de libertad, moralidad y
solidaridad humana”.

El art. 29.1 de la Convención sobre los Derechos del Niño, dispone que los Estados parte convienen:
“…en que la educación del niño deberá estar encaminada a: a) Desarrollar la personalidad, las
aptitudes y la capacidad mental y física del niño hasta el máximo de sus posibilidades; b) Inculcar al
niño el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales y de los principios
consagrados en la Carta de las Naciones Unidas; c) Inculcar al niño el respeto de sus padres, de su
propia identidad cultural, de su idioma y sus valores, de los valores nacionales del país en que vive,
del país de que sea originario y de las civilizaciones distintas de la suya; d) Preparar al niño para
asumir una vida responsable en una sociedad libre, con espíritu de comprensión, paz, tolerancia,
igualdad de los sexos y amistad entre todos los pueblos, grupos étnicos, nacionales y religiosos y
personas de origen indígena; y, e) Inculcar al niño el respeto del medio ambiente natural”.

En la publicación, “El derecho a la educación - Un derecho humano fundamental estipulado por


la ONU y reconocido por tratados regionales y por numerosas constituciones nacionales”, se
señala que: “en el Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
principal instrumento internacional en materia del derecho a la educación, la realización de
dicho derecho descansa esencialmente sobre seis elementos: la obligación (para la enseñanza
primaria) y la gratuidad, la calidad, la educación en derechos humanos, la libertad de los padres
o tutores a elegir los centros escolares, la posibilidad de que personas privadas o jurídicas creen
y dirijan centros escolares, el principio de no discriminación y la cooperación internacional”.

La citada publicación de la ONU establece los elementos constitutivos del derecho a la


educación que son: a) Obligación y gratuidad; b) Calidad, compuesta por los sub-elementos,
dotación, accesibilidad, aceptabilidad y adaptabilidad; c) Educación en derechos humanos; y, d)
Libertad de los padres o tutores a escoger los centros escolares.

El art. 5 del Código Niño, Niña y Adolescente (CNNA) señala: “Los niños, niñas o
adolescentes, como sujetos de derecho, gozan de todos los derechos fundamentales y garantías
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 505
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

constitucionales inherentes a toda persona, sin perjuicio de la protección integral que instituye
este Código.

Además, es obligación del Estado asegurarles por Ley o por otros medios, todas las
oportunidades y facilidades tanto a mujeres como a varones, con el fin de garantizarles su
desarrollo integral en condiciones de igualdad y equidad”.

Por su parte, el art. 112 del CNNA: “El niño, niña y adolescente tienen derecho a una educación
que les permita el desarrollo integral de su persona, les prepare para el ejercicio de la ciudadanía
y cualifique para el trabajo, asegurándoles:

1. La igualdad de condiciones para el acceso y permanencia en la escuela;


2. El derecho a ser respetado por sus educadores;
3. El derecho a impugnar criterios de evaluación, pudiendo recurrir a las instancias escolares
superiores;
4. El derecho de organización y participación en entidades estudiantiles;
5. El acceso en igualdad de posibilidades a becas de estudio;
6. La opción de estudiar en la escuela más próxima a su vivienda;
7. Derecho a participar activamente como representante o representado en la junta escolar que le
corresponda;
8. Derecho a su seguridad física en el establecimiento escolar” (las negrillas nos corresponden).

El derecho a la educación otorga a todo ser humano el acceso a un sistema educativo en todos
los niveles garantizando su formación como un alto fin del Estado. Este derecho se encuentra
íntimamente ligado con otros derechos fundamentales como el de igualdad, de libertad de
pensamiento, a participar en la toma de decisiones. El derecho a la educación no admite
distinciones de ninguna naturaleza menos aún limitante alguna, por tanto el Estado tiene la
obligación de asumir políticas efectivas que garanticen el acceso irrestricto de todos los
miembros de la comunidad a una formación constante y permanente.

En conclusión, el derecho a la educación, exige de los poderes públicos acciones reales que
garanticen en todos los casos su efectivo disfrute. El derecho a la educación es un derecho in
crecendo en su ejercicio, en la medida en que se accede a una mayor extensión formativa en los
distintos niveles del proceso de aprendizaje y formación, para lograr una digna subsistencia,
mejorando el nivel de vida y siendo útil a la sociedad, fines éstos encaminados al “vivir bien”.

III.4. La firmeza de los actos administrativos a la luz de la Constitución Política del Estado

El art. 1 de la CPE a tiempo de definir el modelo de Estado, reconoce el carácter eminentemente


democrático de éste, garantizando una forma de convivencia social que necesariamente implica
la concurrencia de libertades e igualdades, donde las relaciones sociales se establecen de
acuerdo a mecanismos de participación ciudadana sin distinciones ni discriminación.

En ese sentido el art. 13.I de la CPE, señala: “Los derechos reconocidos por esta Constitución
son inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y progresivos. El Estado tiene el
deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos”.

De la misma manera que la función legislativa se materializa en la elaboración de leyes y la


judicial en la administración de justicia, las distintas instancias institucionales de la
Administración Pública, llevan a cabo su actividad ejecutiva a través de la emisión de actos
administrativos, que son definidos por Parada Vázquez José Ramón como: "Todo acto dictado
por un Poder Público en el ejercicio de una potestad administrativa y mediante el que impone su
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 506
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

voluntad sobre los derechos, libertades o intereses de otros sujetos públicos o privados, bajo el
control de la jurisdicción contencioso-administrativa". Zanobini lo define como:"Toda
declaración de voluntad, de juicio, de conocimiento o de deseo realizada por una Administración
en el ejercicio de una potestad administrativa".

Los actos administrativos, son considerados favorables cuando amplían la esfera jurídica de los
ciudadanos, asistiendo a éste, otorgándole un derecho, una facultad o liberándole de una carga,
más aún si éstos son singulares y se dirigen a un administrado en concreto. Se presumen válidos
mientras no se demuestre lo contrario por autoridad competente (declaratoria de nulidad).

Dentro de las características inherentes a los actos administrativos, se encuentran tanto la


presunción de legitimidad como la ejecutividad, entendida ésta última como la obligatoriedad,
que hace a la exigibilidad y el deber de cumplimiento del acto a partir de su notificación, que es
el modo o manera procedimental de comunicar a los administrados, personal o colectivamente,
la existencia del acto administrativo, lo que constituye un requisito fundamental que genera
seguridad jurídica, y convicción pública respecto a la eficacia del acto.

Según Acosta Romero, dentro de los medios anormales de extinción del acto administrativo se
halla la revocación, que es un instrumento legal del órgano administrativo para dejar sin efecto
en forma parcial o total un acto administrativo por razones técnicas, de interés público, o de
legalidad; sin embargo, ésta revocación de un acto administrativo que ya ha surtido efectos
favorables para un administrado, no puede ser revocado de oficio.

El art. 27 de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), señala que el acto administrativo


es: “… toda declaración, disposición o decisión de la Administración Pública, de alcance general
o particular, emitida en ejercicio de la potestad administrativa, normada o discrecional,
cumpliendo con los requisitos y formalidades establecidos en la presente Ley, que produce
efectos jurídicos sobre el administrado. Es obligatorio, exigible, ejecutable y se presume
legítimo”.

El art. 51 del Decreto Supremo (DS) 27113 de 23 de julio de 2003, Reglamento a la Ley de
Procedimiento Administrativo, dispone sobre la estabilidad e impugnación del acto
administrativo, expresando taxativamente lo siguiente:

“I. El acto administrativo individual que otorga o reconoce un derecho al administrado, una vez
notificado, no podrá ser revocado en sede administrativa, salvo que:

a) La revocación sea consecuencia de un recurso administrativo interpuesto en término por un


administrado.
b) El administrado, de mala fe, que teniendo conocimiento no hubiera informado del vicio que
afectaba al acto administrativo.
c) La revocación favorezca al interesado y no cause perjuicio a terceros.
d) El derecho hubiese sido otorgado válida y expresamente a título precario.
e) Se trate de un permiso de uso de bienes de dominio público.

El art. 59.II del citado cuerpo legal, dispone que: “No procede la revocación de oficio de los
actos administrativos estables que adquieran esta calidad de conformidad a lo establecido en el
presente Reglamento. La contravención de esta restricción obligará a la autoridad emisora del
acto ilegal o a la superior jerárquica a revocarlo”.

La única condición para que el acto administrativo no pueda ser revocado es su notificación al
administrado, entendido este paso procedimental como el modo de comunicar, personal o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 507
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

colectivamente, la existencia del acto administrativo, garantizando la seguridad jurídica,


convirtiéndose por tanto en una condición legal de la que necesariamente depende la eficacia del
acto. La notificación o publicación de un acto administrativo otorga firmeza a éste, sin que se
pueda modificar el mismo discrecionalmente, más aún si aquella modificación deviene en una
consecuencia gravosa o desfavorable para el administrado. Agustín Gordillo al respecto ha
sostenido: “En suma, la corrección material es excepcional: ha de admitirse sólo con criterio
restrictivo y no podrá encubrirse bajo tal denominación, a actos que constituyen una verdadera
revocación del acto original”.

La jurisprudencia constitucional, respecto a que un acto administrativo haya surtido efectos, en la SC


1074/2010-R de 23 de agosto, ha señalado: “Como se ha señalado supra y a partir de la
estructuración del principio de “autotutela” de la administración pública y en virtud a la
característica de firmeza de los actos administrativos, se configura una garantía constitucional a
favor del administrado, en virtud de la cual, ningún nivel de la administración pública, puede
modificar, alterar o anular “de oficio” un acto administrativo estable, cuya presunción de
legitimidad y legalidad, solamente puede ser desvirtuada a través del control jurisdiccional de actos
administrativos.

Ahora bien, es imperante señalar también, que un acto administrativo, puede ser anulado
de acuerdo a las causales establecidas taxativamente en el art. 35 de la Ley de
Procedimiento Administrativo, en ese contexto, interpretando teleológica y sistémicamente
el parágrafo II de esta disposición, se tiene que la nulidad de actos administrativos es
procedente a través de los recursos administrativos disciplinados en la propia LPA,
empero, para el supuesto en el cual, la propia administración pública, pretenda anular un
acto administrativo estable en virtud del cual se generaron efectos jurídicos a favor del
administrado, ésta no puede alegar la nulidad de “oficio”, sino debe acudir al control
jurisdiccional ulterior de los actos administrativos, a través del proceso contencioso
administrativo”.

De todo lo expuesto anteriormente, se puede concluir que los actos administrativos, emitidos por
cualquier autoridad pública, incluidos aquellos que fueran pronunciados por directores de
centros educativos que generen beneficios o concedan derechos a favor de los administrados, no
pueden ser revocados por la mera voluntad de los eventuales detentadores de la “autoridad
pública”.

III.4. La excepcionalidad al carácter subsidiario dentro de la acción de amparo


constitucional

Resulta imprescindible, en primer término, recordar que la jurisprudencia y doctrina


constitucional han dispuesto que, no obstante el carácter subsidiario del amparo, cuando existan
situaciones singulares en casos excepcionales, con el único fin de evitar un irreparable daño, es
posible otorgar la tutela, aún en caso que el accionante cuente con otra vía o recurso legal, por
no actuar con la inmediatez que la emergencia exige.

La SC 0289/2010 de 7 de junio, ha señalado: “Del entendimiento referido por la jurisprudencia


glosada, además de inferirse la naturaleza subsidiaria del amparo, también se concluye la
existencia de la excepción a la subsidiariedad cuando la restricción o supresión de los derechos
y garantías constitucionales denunciados, ocasionen perjuicio irremediable e irreparable;
empero, cabe advertir que para la aplicación de esta excepción no basta con invocar la
existencia de daño irreparable o irremediable, sino que también, la parte accionante debe
demostrar en forma fehaciente que los actos que se denuncian como ilegales causarán un daño
irreparable que no podrá ser subsanado por otros medios, recursos ordinarios o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 508
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

administrativos o cualquier otra vía idónea al efecto, o que la protección concedida podría
resultar ineficaz por tardía, por lo mismo, en caso de presentarse cualquiera de esas
circunstancias, quien recurre de amparo no debe limitarse sólo a invocarlas, sino debe
demostrarlas y probarlas para que la excepción proceda a su favor”.

III.5. Análisis y resolución del caso específico

Hecha la valoración de antecedentes y considerando que el art. 128 de la CPE, dispone que la
acción de amparo constitucional ha sido instituida como una acción tutelar de defensa contra
actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la misma Constitución Política del Estado y la ley, se concluye lo siguiente:

En el presente caso, la gestión escolar 2012 se hallaba en curso, sin que la situación respecto a la
inscripción de la hija de la accionante, se hubiese resuelto, o peor aún, en los hechos, la menor
fue eliminada de los listados definitivos de alumnos admitidos en el citado centro educacional,
hecho que indudablemente trae consigo una situación de incertidumbre, que resulta inadmisible,
motivo también más que suficiente para no exigir en el presente caso, el agotamiento de la fase
previa de impugnación en sede administrativa, en razón a que el menoscabo en la formación de
A.A. evidentemente podría tener efectos negativos en su enseñanza.

En consecuencia, corresponde ingresar a analizar el fondo del asunto sometido a análisis.

III.5.1. Respecto al derecho a la educación

De la revisión de los antecedentes que informan la presente acción de amparo constitucional, se


puede establecer que el demandado Ismael Jonathan Ramírez Condori, Director de la Unidad
Educativa “Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III” de la ciudad de El Alto, en una clara actitud
insensible ha vulnerado el derecho a la educación de la hija de la accionante, por cuanto no ha
efectuado ningún acto conducente a la reposición de la lista inicialmente publicada de alumnos
admitidos en el citado establecimiento escolar al inicio de la gestión 2012, restituyendo de ésta
manera el derecho de la menor a su formación. Asimismo no ha demostrado que las
declaraciones juradas cursantes en el expediente, relacionadas con los hechos denunciados por la
accionante, sean falsas, más aún si en la propia audiencia pública de la presente acción tutelar,
declaró y reconoció la existencia de injerencia por parte de la Junta Escolar en las decisiones
institucionales, extremo no válido bajo el prisma del apego y respeto por los derechos
fundamentales.

Este manejo discrecional e informal de las listas de alumnos admitidos, por parte de Ismael
Jonathan Ramírez Condori y Mónica Castillo, Director y Presidenta de la Junta Escolar ambos
de la Unidad Educativa “Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III”, en los hechos derivó en un daño
evidente a la menor A.A., amenazando y restringiendo su derecho a la educación, perjuicio
demostrable por el sólo hecho de su no aceptación en el referido centro educativo, vulnerándose
de esta manera el art. 112.1 y 6 del CNNA.

III.5.2. En cuanto a la garantía de la igualdad

En cuanto a la denuncia efectuada por parte de la accionante, respecto a la existencia de


transgresión de la garantía de la igualdad de su hija, al momento de su inscripción en la Unidad
Educativa “Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III”, éste hecho configura la necesidad de que para su
lesión existan hipótesis similares y un trato disímil; en ese sentido, en el caso en examen se pudo
establecer que efectivamente existen situaciones similares y trato diferenciado, razón por la cuál,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 509
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

este Tribunal encuentra violación del derecho a la igualdad, por cuanto, la menor no ha recibido
atención igual que sus pares, recibiendo más bien trato discriminatorio y excluyente al momento
de su eliminación sin justificación alguna de las listas de alumnos admitidos en el ya citado
centro educativo, para la gestión 2012.

La discriminación producida en autos, implica preferencia, exclusión, restricción, extremos


fácticos que han impedido el pleno goce de derechos fundamentales por parte de la hija de la
accionante. Los privilegios o trato desigual en desmedro de algunas personas, son prácticas
proscritas de una sociedad incluyente que basa sus cimientos en la plurinacionalidad, base moral
y eje supremo del Estado de Derecho del buen vivir.

Finalmente, cabe señalar que de acuerdo a lo señalado en el Fundamento Jurídico III.4 de la


presente Sentencia, la publicación final de listas de alumnos admitidos en la Unidad Educativa
“Tcnl. Rafael Pabón Cuevas III”, no debió ser modificada o revocada unilateralmente, por
cuanto dicho acto administrativo, ya produjo consecuencias de orden jurídico de beneficio
colectivo en favor de los alumnos postulantes al nivel inicial.

De todo lo expuesto, se concluye que el Juez de garantías, al conceder la tutela evaluó de


manera correcta, y completa los datos del proceso y las normas aplicables al mismo, en razón a
que se constata la lesión de los derechos invocados por la accionante.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de conformidad con el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la
Resolución 37-A/2012 de 10 de febrero, pronunciada por el Juez Tercero de Partido y Sentencia
de la ciudad de El Alto del Distrito Judicial de La Paz; y en consecuencia, CONCEDER la
tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0084/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00146-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 16 de febrero de 2012, cursante de fs. 110 a 115, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Dimelsa Paola Anturiano
Condarco contra Félix Flores Huarachi, Mario Antonio Tejada Quiroz, Nicolás Veliz
García, Martha Carmen Rosa Jiménez Flores y Flora Riva Molina de Cruz, Presidente y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 510


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

miembros de la Directiva de la Organización Territorial de Base (OTB) “Iquircollo Norte


Central” del municipio de Quillacollo.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memoriales presentados el 4 y 31 de enero de 2012, cursantes de fs. 35 a 38 vta. y de 65 a


70, la accionante expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 27 de noviembre de 2011, aproximadamente a horas 9:00, su domicilio fue invadido por los
demandados, quienes en su condición de miembros de la directiva de la OTB “Irquircollo Norte
Central”, acompañados por un grupo de casi doscientas personas, invadieron su vivienda en
forma arbitraria, agrediendo físicamente a su madre, sin considerar que es una persona de la
tercera edad y padece de diabetes, ésta fue empujada cayendo al suelo, posteriormente
procedieron a sacar el medidor de agua que su familia adquirió con sus propios recursos, con el
pretexto de tener una deuda de más de cuatro meses por el consumo de agua potable y a pesar
que en ese momento su madre exhibió las facturas que demostraban estar al día en el pago del
servicio, mantuvieron su determinación de retirar el medidor, conminándole para que lo instale
fuera del domicilio y aunque solicitó que le dieran el plazo de dos días, el Presidente de la OTB
negó su pedido y como respuesta al reclamo que efectuó su esposo por haber ingresado en forma
arbitraria a su casa, fueron objeto de insultos que mellan la dignidad de toda su familia; además
tampoco respetaron a la autoridad policial, que fue objeto de maltrato.

No conformes con ese atropello, la desacreditaron mediante los medios de comunicación por
cuanto trabaja en la Brigada de Protección a la Familia; posteriormente, el 28 de noviembre de
2011, se querelló contra la Mesa Directiva de la OTB, por allanamiento de domicilio y
amenazas, quienes enterados de la denuncia formulada, en horas de la mañana del 4 de
diciembre del señalado año, procedieron en su ausencia, al corte de suministro de agua potable
retirando la cañería de conexión que da a la calle, además de realizar “grafittis” en el frontis de
su domicilio con dibujos obscenos y palabras soeces, dejándoles sin el líquido elemento por más
de dos meses, sin considerar la edad ni la salud de sus padres, ni de sus hijos menores.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Denuncia la lesión de su derecho al agua, citando al efecto los arts. 16.I, 373 y 374 de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se disponga la restitución de la acometida de agua potable a su domicilio.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 16 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs.
109 y vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la accionante ratificó y reiteró los fundamentos de la demanda.


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 511
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.2. Informe de las personas demandadas

El Presidente y miembros de la Directiva de la OTB “Irquircollo Norte Central” de Quillacollo,


a través del informe escrito cursante de fs. 106 a 108 vta. de obrados, que fue leído en audiencia,
señalaron que: a) La OTB, cuenta con el registro de su personería jurídica, otorgada a través de
la Resolución Sub Prefectural 0006/08 de 29 de agosto y Resolución Municipal 0054/08 de 1 de
julio ambos de 2008, por otro lado su Estatuto Orgánico establece las obligaciones y derechos de
los socios; b) La Ley 2066 de 11 de abril de 2000, modificatoria de la Ley de Agua Potable y
Alcantarillado Sanitario, claramente especifica el objeto y alcance de la Ley, estableciendo en su
art. 71, las sanciones a los usuarios que alteren los instrumentos de medición, además que dicha
norma establece los derechos de los usuarios; sin embargo la accionante no acudió en ningún
momento ha efectuar su reclamo, ni agotó este en otras instancias, como la Superintendencia de
Saneamiento Básico, tampoco hizo uso de los recursos de revocatoria y jerárquico; y, c) El 27 de
noviembre de 2011, ingresaron al domicilio de la accionante con la autorización de su madre,
para verificar el mal uso que se hacía del medidor de agua, por lo que solicitaron a los
propietarios que trasladen su instalación a la calle, como lo hicieron todos los demás socios para
efectuar un mejor control, pero ante la negativa de esa petición se tuvo una asamblea de socios
el 4 de diciembre del mismo año, efectuada a convocatoria de la OTB a la que representan,
oportunidad en la que se informó sobre el mal uso del medidor de la accionante, la denuncia que
ésta les hizo ante la Policía Boliviana, por lo que fue emitido un Voto Resolutivo, disponiéndose
el corte de agua hasta que cumpla con la instalación de su medidor a la calle, pero hasta la fecha
no cumplió con esa disposición.

I.2.3. Resolución

El Juez Segundo de Partido de Familia, Niñez y Adolescencia de Quillacollo, del Distrito


Judicial de Cochabamba, Porfirio Alba Alba, constituido en Juez de garantías, pronunció la
Resolución 16 de febrero de 2012, corriente de fs. 110 a 115, concediendo la tutela solicitada y
disponiendo la restitución de la acometida de agua potable hacia el domicilio de la accionante,
en el plazo de cuarenta y ocho horas, encomendando su cumplimiento a los Directivos de la
OTB “Iquircollo Norte Central”, ahora demandados, con los siguientes argumentos: 1) Si bien
pueden existir fundamentos valederos para sancionar a cualquier ciudadano, empero, la sanción
o determinación que se asuma, no puede restringir derechos o garantías constitucionales,
máxime si por mandato del art. 410 de la CPE, ningún procedimiento, ley, estatuto o
determinación pueden desconocer lo contenido en la Norma Suprema; 2) A nadie se puede
privar del derecho al agua y en todo caso, si se cree que el usuario o beneficiario de ese servicio
no cumple con sus deberes o incurre en actos contrarios al régimen que lo rige, se debe activar el
procedimiento en el cual se demuestre de manera indubitable que la acusación contra el usuario
o beneficiario son ciertas; lo contrario, sería anticipar una pena sin un debido proceso y atentado
a la vida; y, 3) Resulta evidente que el derecho al agua fue lesionado al impedir su consumo y tal
como se precisó, el mismo constituye un derecho humano que ha sido constitucionalizado en la
Ley Suprema, y si bien constituye un derecho colectivo, así como individual; sin embargo,
ambos deben coexistir en igualdad de condiciones, por lo que ningún grupo mediante medidas
de hecho, está autorizado a interrumpir el ejercicio del mismo.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. A través de los recibos emitidos el 6 de octubre de 2011 por la OTB “Iquircollo Norte
Central”, se establece la cancelación efectuada por la accionante por concepto de consumo de
agua potable, de los meses de junio, julio, agosto y septiembre de 2011(fs. 31).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 512
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. El 28 de noviembre de 2011, la accionante presentó un memorial ante el Fiscal de Materia


de la localidad de Quillacolo, interponiendo querella contra Mario Tejada, Nicolás Veliz y
Martha Flores por el delito de allanamiento a su domicilio y amenazas, en cuyo mérito el Fiscal
de Materia mediante requerimiento de la misma fecha dispuso la apertura de la investigación,
procediendo a citar y recibir la declaración informativa de los denunciados (fs. 1 a 25).

II.3. Mediante informe de 4 de diciembre de 2011, funcionarios policiales de la Brigada de


Protección a la Familia de Quillacollo, hicieron conocer al Comandante Regional de ese
Municipio, que a horas 10:00 de ese día se constituyeron en la zona de Iquircollo Norte
específicamente en el domicilio de la accionante donde verificaron que una multitud de
aproximadamente doscientas personas se encontraba en el lugar, habiendo procedido a cortar la
cañería de agua potable; situación que no pudieron impedir al estar esas personas armadas de
palas y picotas (fs. 26).

II.4. Mediante certificación de 22 de diciembre de 2011, emitida por el Jefe del Departamento
Técnico de la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Quillacollo (EMAPAQ),
se evidencia que existe una administración vecinal de agua potable y que el domicilio de la
accionante no cuenta con el mencionado servicio (fs. 27).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia que los demandados vulneraron el derecho al agua, por cuanto después
de haber allanado su domicilio hecho que motivó la presentación de una querella en su contra,
en horas de la mañana del 4 de diciembre de 2011; procedieron en su ausencia, al corte de
suministro de agua potable, retirando la cañería de conexión que da a la calle, dejándoles sin el
líquido elemento por más de dos meses, sin considerar la edad ni la salud de sus padres, ni de
sus hijos menores. Corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. El derecho al agua y la protección del Estado Plurinacional

Con relación al derecho al agua, instituido por el art. 16.I de la CPE y reconocido como un
derecho fundamentalísimo para la vida por el art. 373.I de la Norma Fundamental y el rol que
corresponde al Estado en su protección y promoción prioritaria, la jurisprudencia constitucional
a través de la SC 0559/2010-R de 12 de julio, ha establecido que: “De los preceptos
constitucionales transcritos líneas supra, se puede concluir que no sólo se instituyó el derecho
al agua en la Constitución vigente, sino que la voluntad del constituyente fue más allá del
simple reconocimiento, pues se instituyó acciones positivas a cumplir por parte del Estado a los
fines de garantizar el acceso universal y equitativo a los servicios básicos de agua potable por
constituirse el derecho al acceso al agua como un derecho humano. No es menos cierto además,
que la Constitución vigente, considera al derecho al agua como un derecho fundamentalísimo
para la vida en el marco de la soberanía del pueblo; de ello se puede deducir que la propia Ley
Fundamental vincula al derecho al agua con el derecho a la vida, instituyendo por lo tanto una
estricta conexitud entre el líquido elemento y la vida misma puesto que por disposición del ya
citado art. 374.I de la CPE, el Estado debe ineludiblemente proteger y garantizar el uso
prioritario del agua para la vida.

En su oportunidad, la Corte Constitucional de Colombia mediante la Sentencia T-270/07, citada


por la SC 0156/2010 de 17 de mayo, expresó que: 'El agua es un recurso natural limitado y un
bien público fundamental para la vida y la salud. El derecho humano al agua es indispensable
para vivir dignamente y es condición previa para la realización de otros derechos humanos'.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 513


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El derecho humano al agua es el derecho de todos a disponer de agua suficiente, salubre,


aceptable, accesible y asequible para el uso personal y doméstico. Un abastecimiento adecuado
de agua salubre es necesario para evitar la muerte por deshidratación, para reducir el riesgo
de las enfermedades relacionadas con el agua y para satisfacer las necesidades de consumo y
cocina y las necesidades de higiene personal y doméstica.

Del entendimiento arribado por la Corte Constitucional de Colombia, se puede deducir que el
derecho al agua está también íntimamente vinculado y relacionado con el derecho a la salud,
por lo que se constituye en un derecho básico y elemental que debe ser garantizado por el
Estado a efectos de lograr aquel fin máximo cual es, el vivir bien'”.

III.2. La subsidiaridad de la acción de amparo constitucional y sus excepciones

La acción de amparo constitucional, conforme lo previsto en los arts. 128 y 129.I de la CPE,
tendrá lugar: “…contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o
de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman, o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley” y “…siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados"; disposiciones que expresamente establecen que las supuestas lesiones a los
derechos fundamentales y garantías constitucionales deben ser reparadas en la jurisdicción
ordinaria, y sólo en defecto de ésta, de ser evidente la lesión al derecho invocado e irreparable el
daño emergente de la acción u omisión o de la amenaza de restricción de los derechos, se
otorgue la jurisdicción constitucional.

La uniforme jurisprudencia constitucional ha desarrollado el carácter subsidiario de la acción de


amparo constitucional, señalando que: “...no podrá ser interpuesta esta acción extraordinaria,
mientras no se haya hecho uso de los recursos ordinarios o administrativos y, en caso de haber
utilizado los mismos deberán ser agotados dentro de ese proceso o vía legal, sea judicial o
administrativa, salvo que la restricción o supresión de los derechos y garantías constitucionales
ocasione perjuicio irremediable e irreparable” (SSCC 0374/2002-R, 0106/2003-R, 0552/2003-
R, 1089/2003-R, 1337/2003-R, entre otras).

Así, la SC 0832/2005-R de 25 de julio, refiriéndose a los supuestos en los que el amparo


constitucional entra a tutelar de manera directa e inmediata, prescindiendo de su carácter
subsidiario, indicó: “…Dentro de esos supuestos excepcionales, en los que el amparo entra a
tutelar de manera directa e inmediata, prescindiendo inclusive de su carácter subsidiario, está
la tutela contra acciones o medidas de hecho cometidas por autoridades públicas o por
particulares, entendidas éstas como los actos ilegales arbitrarios que desconocen y prescinden
de las instancias legales y procedimientos que el ordenamiento jurídico brinda, realizando
justicia directa, con abuso del poder que detentan frente al agraviado, actos que resultan
ilegítimos por no tener respaldo legal alguno y que por el daño ocasionado y la gravedad de
los mismos, merecen la tutela inmediata que brinda el amparo por vulnerar derechos
fundamentales…” (el resaltado es nuestro).

III.3. Análisis de la problemática planteada en la acción de amparo constitucional

En el caso que se analiza, la accionante denuncia que los demandados el 4 de diciembre de


2011; procedieron en su ausencia, al corte de suministro de agua potable en su vivienda,
retirando la cañería de conexión que da a la calle, dejando a su familia y a ella sin el líquido
elemento por más de dos meses; medida que fue asumida sin considerar la edad ni la salud de
sus padres, ni de sus hijos menores.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 514


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión de obrados, se constata que el hecho denunciado fue ejecutado por los
demandados, sin un proceso previo y sin causal legal que justifique esa medida de hecho, que
según el propio informe que aquéllos presentaron, el corte de agua fue ejecutado de manera
violenta después de verificar el mal uso que se hacía del medidor de agua y por no haber
cumplido los propietarios con su traslado a la calle; Resolución que fue adoptada en una
asamblea de socios el 4 de diciembre del mismo año, donde se emitió un Voto Resolutivo,
disponiéndose el corte de agua hasta que cumpla con la instalación del medidor en la calle.

El motivo de la determinación asumida de cortar el agua potable a la familia de la accionante,


bajo ninguna circunstancia puede justificarse, puesto que no se puede privar del líquido
elemento como medida de presión alguna, ni menos como una sanción, con el único argumento
de ser una determinación asumida en una reunión general de socios, menos sin que se hubiera
seguido un proceso previo y como emergencia de una causal prevista por ley.

En virtud de lo expresado nos encontramos ante una medida de hecho cometida por particulares,
susceptible de ser tutelada mediante la acción de amparo constitucional de manera directa e
inmediata, prescindiendo inclusive de su carácter subsidiario, ante un acto que resulta ilegítimo
por no tener respaldo legal alguno; y además por el daño ocasionado y la gravedad del mismos,
ameritando la situación planteada la concesión que brinda el amparo constitucional, habiéndose
constatado la vulneración del derecho fundamental al agua, vinculado con los derechos a la vida,
a la salud y la dignidad humana.

Es importante señalar que el principio de subsidiariedad cae por su propio peso ante la
vulneración del derecho a la vida, dignidad y abuso de autoridad (así la mencionada SC
0832/2005-R).

Consiguientemente, la situación planteada se encuentra dentro de las previsiones y alcances de


la acción de amparo constitucional, por lo que el Juez de garantías, al haber concedido la tutela
solicitada, ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y dado una
correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución de 16 de febrero
de 2012, cursante de fs. 110 a 115 pronunciada por el Juez Segundo de Partido de Familia,
Niñez y Adolescencia de Quillacollo, del Distrito Judicial de Cochabamba, y en consecuencia
CONCEDER la tutela solicitada, en los términos dispuestos por el Juez de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 515


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0085/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00002-2012-01-AAC
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución 01/2012 de 6 de enero, cursante de fs. 32 a 34 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Milton Valentín Valenzuela
Raya contra Oscar Maldonado Sempértegui, Óscar Gonzáles Orozco, Teresa Quicaño
Chigua Vda. de Álvarez, Rosario Laime Muñoz de Cáceres y Eric Aldunate Poquechoque,
Presidente, Vicepresidente, Secretaria y Vocales, respectivamente, del Comité Electoral de
la Cooperativa de Teléfonos Automáticos Potosí (COTAP) Ltda.

I.ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 4 de enero de 2012, cursante de fs. 12 a 15, el accionante


señala lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

a) Antecedentes de la petición de tutela

Refiere el accionante haber cumplido con todos los requisitos de admisión exigidos por los arts.
9 del Estatuto de la Cooperativa, concordante con el 66 de la Ley General de Sociedades
Cooperativas (LGSC), por lo que señala adquirió la calidad de socio de COTAP Ltda., razón por
la cual, en uso de los derechos que le asisten, el 18 de noviembre de 2011, fue elegido por la
magna asamblea de socios como precandidato a los Consejos de Administración y Vigilancia;
de la misma forma, precisa que en la misma asamblea, también fue designado el Comité
Electoral para llevar adelante el citado proceso eleccionario, instancia compuesta por los ahora
demandados.

Indica que, cinco de los candidatos presentaron una nota al Comité Electoral, arguyendo el
incumplimiento de lo establecido en el art. 49 inc. a) del Estatuto Orgánico de la citada
Cooperativa, disposición que señala como requisitos de habilitación para la candidatura, “Ser
socio de la Cooperativa con un mínimo de tres años de antigüedad y haber pagado la totalidad
del valor del certificado de aportación”; sin embargo, denuncia el accionante que a pesar de
haberse emitido el informe legal de 12 de diciembre de 2011, el Comité Electoral, sin
fundamento legal alguno emitió la Resolución 001/2011, disponiendo en su parte resolutiva
“Inhabilitar del proceso Eleccionario al socio Milton Valentín Valenzuela Raya (…) por no
cumplir con la antigüedad de tres años, hasta el día de la nominación de los candidatos (as)
realizado en Asamblea General de 18 de noviembre de 2011” (sic).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 516


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Manifiesta que, de acuerdo al referido art. 49 inc. a), para ser elegido miembro del Consejo de
Administración se requiere un mínimo de tres años de antigüedad, concluyendo que, en su caso,
su persona ha cumplido con este plazo el 19 de diciembre de 2011, máxime cuando la elección
se encontraba programada para el día sábado 21 de enero de 2012.

b) Acto denunciado como lesivo

Denuncia el accionante que la Resolución 001/2011 de 15 de diciembre, suscrita por los


miembros del Comité Electoral, constituye un acto ilegal por vulnerar el derecho al sufragio
inserto en el art. 26.1 y 2 de la Constitución Política del Estado (CPE), ya que fue admitido
como socio el 19 de diciembre de 2008, habiendo cumplido con el requisito inserto en el art. 49
inc. a) del Reglamento Orgánico de la citada Cooperativa el 19 de diciembre de 2011, toda vez
que la elección fue programada para el día sábado 21 de enero de 2012.

De acuerdo a lo señalado, precisa además el accionante que “del concepto de ciudadanía emerge
el derecho al sufragio que en realidad es un derecho político reconocido como derecho humano
en forma universal y comprende las dos calidades ya sea como elector o como elegible en un
proceso eleccionario (…) que por su propia naturaleza, de ninguna manera puede ser restringido
sino en casos especiales, fundamentalmente cuando se han restringido sino en casos especiales
fundamentalmente cuando se han restringido algunos de los derechos políticos que impidan la
participación o intervención del ciudadano 'sancionado' conforme a la normativa aplicable a
cada caso particular, lo que de ninguna manera ha sucedido en el caso presente” (sic).
Finalmente señala el peticionante de tutela que el acto ilegal antes señalado, vulnera también su
derecho constitucional a la petición.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante en mérito a los aspectos desarrollados supra, denuncia la lesión de sus derechos al
sufragio y a la petición, citando al efecto el art. 26.1 y 2 de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente” la acción, sin especificar nada más al respecto

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 6 de enero de 2012, encontrándose presentes la parte


accionante y demandada, el representante del Ministerio Público y los terceros interesados
Narda Maldonado Barrancos, Carlos Dávila Díaz, Juan Miguel Sanabria Solís, Isabel Valda
Salguero y Jorge Bruno Arequipa López, conforme consta en el acta cursante de fs. 28 a 31, se
produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante ratificó plenamente el contenido de su acción, aclarando los supuestos


fácticos y el petitorio, citando las mismas normas supuestamente vulneradas, añadiendo que el
Tribunal Electoral Departamental de Potosí, en virtud a una consulta efectuada por el propio
Comité Electoral de COTAP Ltda., concluyó que el accionante se hallaba habilitado para
participar de la justa electoral a efectuarse en la mencionada Cooperativa.

I.2.2. Informe de las personas demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 517


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La parte accionada a través de su abogado, en audiencia sostuvo: a) El accionante no cumplió


con el requisito de antigüedad requerido, toda vez que se hizo socio de COTAP Ltda., el 19 de
diciembre de 2008 y las nominaciones de candidatos fue efectuada el 18 de noviembre de 2011;
b) Se denuncia la vulneración del derecho al sufragio, inaplicable al caso por cuanto su derecho
a sufragar no fue afectado en modo alguno; y, c) En lo referente a la vulneración del derecho de
petición, no existió tal extremo, por cuanto la documentación requerida por el accionante le fue
entregada oportunamente y en modo alguno debe entenderse que la respuesta necesariamente
deba ser positiva, más aún si la petición del accionante no fue impedida.

I.2.3. Intervención del representante del Ministerio Público

En uso de la palabra el representante del Ministerio Público, señaló que: 1) La Resolución


001/2011, emitida por el Comité Electoral de COTAP Ltda., adolece de deficiencias, tales como
fechas y datos respecto a los responsables que elaboraron los informes de sustento; 2) El
accionante fue inscrito como socio en el kardex de COTAP Ltda., el 6 de diciembre de 2008,
razón por la cual se encuentra dentro de los márgenes de tiempo permitidos para su habilitación
como candidato; y, 3) El informe del Tribunal Electoral Departamental “es por demás” (sic), ya
que al interior de la referida Cooperativa, la instancia máxima es la asamblea de socios, razón
por la cual se pronunció por la admisión de la acción, requiriendo porque se deje sin efecto la
Resolución 001/2011, debiendo procederse a la habilitación del accionante como candidato.

I.2.4. Intervención de los terceros interesados

Los terceros interesados, Narda Maldonado Barrancos, Carlos Dávila Díaz, Juan Miguel
Sanabria Solís, Isabel Valda Salguero y Jorge Bruno Arequipa López, no hicieron uso de la
palabra durante el desarrollo de la audiencia.

I.2.5. Resolución

La Sala Civil, Comercial y Familiar del Tribunal Departamental de Justicia de Potosí, pronunció
la Resolución 01/2012 de 6 de enero, cursante de fs. 32 a 34 vta., por la cual concedió la tutela
solamente en cuanto al derecho al sufragio, ordenando la habilitación del accionante como
candidato en las elecciones a celebrarse en COTAP Ltda.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Se establece que, Milton Valentín Valenzuela Raya, es titular de una acción en COTAP
Ltda., tal como lo evidencia la copia legalizada del kardex de Control de Guía Telefónica (fs. 4).

II.2. Por el contenido del certificado JA-CERT-028/2011 de 28 de diciembre, suscrito por el


Jefe de División Cobranzas y por el Jefe de Aportaciones de la referida Cooperativa, se
evidencia que Milton Valentín Valenzuela Raya, se registró como socio de la misma, el 19 de
diciembre del 2008 (fs. 5).

II.3. En virtud al contenido en la nota C.E. 055/2011 de 27 de diciembre, se evidencia que el


Comité Electoral responde a la nota de 27 del mismo mes y año, remitida por el ahora
accionante; en ese sentido, a través de ésta, se hace conocer el día de las elecciones y el lugar de
celebración de dicho acto (fs. 6).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 518


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.4. Mediante Resolución 001/2011 de 15 de diciembre, suscrita por el Presidente,


Vicepresidente, Secretaria y Vocales del Comité Electoral de COTAP Ltda., autoridades ahora
demandadas, invocando los arts. 20 y 25 del Reglamento de Elecciones de la mencionada
Cooperativa, en el artículo único de la parte resolutiva de dicha decisión, establecen lo siguiente:
“Inhabilitar del proceso Eleccionario al socio Milton Valentín Valenzuela Raya, propietario de
la línea Telefónica 62 2-6006 por no cumplir con la antigüedad de tres años, hasta el día de la
nominación de los candidatos (as) realizado en Asamblea General del 18 de noviembre de
2011”(sic) (fs.9).

II.5. Por memorial de 19 de diciembre de 2011, el accionante impugnó la Resolución 001/2011,


solicitando su habilitación como candidato a los comicios electorales (fs. 11 vta.).

II.6. A través de la nota C.E. 054/2011 de 20 de diciembre, el Comité Electoral, hace conocer al
ahora accionante, la decisión de ratificación de la Resolución impugnada. Se evidencia además
que dicha nota fue recepcionada por el peticionante de tutela el 21 de diciembre de 2011 (fs. 10).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

En este estado de cosas, corresponde ahora precisar con claridad el objeto y la causa de la
petición de tutela; en ese orden, se tiene que el objeto de la presente acción de amparo
constitucional, es la petición de tutela constitucional para el resguardo de los derechos al
sufragio y a la petición denunciados como vulnerados por el accionante; asimismo, la causa, es
decir, el acto denunciado como lesivo, es la Resolución 001/2011 de 15 de diciembre, suscrita
por los miembros del Comité Electoral, decisión que inhabilita al accionante del proceso de
elección de miembros al Consejo de Administración y Vigilancia, por no cumplir con la
antigüedad de tres años exigida por la normativa interna. Así, este acto es considerado ilegal por
el peticionante de tutela, porque considerando que la elección se encontraba programada para el
día sábado 21 de enero de 2012; en su caso, el 19 de diciembre de 2011, se hubiera cumplido
con los tres años exigidos por la normativa.

Ahora bien, en mérito al objeto y causa de la presente acción de tutela, con la finalidad de
desarrollar una coherente argumentación jurídico-constitucional, este fallo se estructurará en dos
partes, la primera referente a la denuncia de vulneración del derecho al sufragio, en la cual se
desarrollarán dos problemas jurídicos esenciales: la eficacia horizontal de los derechos
fundamentales y el principio de razonabilidad; y, la segunda parte, analizará aspectos relativos a
la denuncia de afectación del derecho de petición.

En consecuencia, en base a los aspectos antes señalados, se procederá a analizar si en el presente


caso, corresponde la concesión o no de la tutela solicitada.

III.1. El derecho al sufragio a la luz de la dogmática de la eficacia horizontal de los


derechos fundamentales

Considerando que uno de los derechos denunciados como vulnerados por el accionante es el
derecho al sufragio, el cual tiene una naturaleza de derecho político tradicionalmente exigible
solamente al poder público, en el marco del constitucionalismo contemporáneo y en particular
del régimen constitucional imperante en el Estado Plurinacional de Bolivia, para efectos de
analizar el caso concreto, con carácter previo, deberá desarrollarse la dogmatica y concepción de
la eficacia horizontal de los derechos fundamentales, tarea que será desarrollada infra.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 519


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.1.1. La eficacia horizontal de los derechos fundamentales. La concepción de la teoría


alemana del Drittwirkung y el fenómeno de irradiación de los contenidos esenciales de
derechos fundamentales y de los valores justicia e igualdad

En principio, no podría desarrollarse una coherente argumentación jurídica sin analizar con
carácter previo y en contextos comparados y por supuesto en el ámbito interno, la evolución del
constitucionalismo, su incidencia en el modelo de Estado y en la eficacia de los derechos
fundamentales.

En efecto, la teoría constitucional, precisa los orígenes del constitucionalismo en el llamado


periodo clásico o demo-liberal, en el cual, como influjo directo de los procesos histórico-
políticos Ingles, Norteamericano y Francés, se diseñó las bases de un constitucionalismo acorde
con un modelo de Estado Liberal, contexto en el cual puede entenderse el tenor literal del art. 16
de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, que señala:
“Toda sociedad en la cual no esté establecida la garantía de los derechos, ni determinada la
separación de poderes, carece de Constitución”, postulado a partir del cual, se establece que el
constitucionalismo demo-liberal, consistía en un mecanismo de naturaleza jurídico-política
destinado a poner límites al ejercicio del poder público; en ese orden, se puede colegir que en el
Estado demo-liberal, las libertades de los ciudadanos se caracterizaban por su eficacia vertical o
su oponibilidad frente al poder público.

En la perspectiva desarrollada, debe además resaltarse que la ingeniería político-jurídica del


constitucionalismo demo-liberal, basó su estructura en tres pilares esenciales: i) El principio de
generalidad de la ley; ii) El reconocimiento de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley; y,
iii) La consagración de la autonomía de la voluntad privada. En este marco, precisamente, la
gran relevancia del resguardo reforzado de la autonomía de la voluntad, constituyó en la etapa
demo-liberal, el fundamento esencial para la eficacia vertical de los derechos y el óbice evidente
para una eficacia horizontal de los mismos.

Ahora bien, desde una perspectiva sociológica, la realidad evidencia sociedades contemporáneas
heterogéneas y plurales, las cuales no pueden ser reducidas a un mismo orden conceptual,
formulaciones abstractas o concepciones verticales de derechos; en ese entendido, los nuevos
paradigmas del modelo de Estado Contemporáneo, basan su estructura en pilares axiomáticos
esenciales como ser la justicia e igualdad, aspectos a partir de los cuales, los otrora pilares del
Estado, tienen una connotación diferente, ya que en este contexto, por ejemplo la autonomía de
la voluntad o las esferas privadas de actuación, encuentran un límite en el respeto a los derechos
fundamentales, por eso, bajo estos nuevos postulados, puede sustentarse una eficacia no sólo
vertical sino también horizontal de los derechos fundamentales.

Por lo expresado, antes de desarrollar la dogmática de la eficacia horizontal de derechos


fundamentales en el orden interno, corresponde realizar una remembranza de esta concepción en
derecho comparado; por tal razón, cabe señalar que esta tesis, tiene génesis directa en la llamada
teoría alemana de la “Drittwirkung der Grundrechte”, desarrollada por el Tribunal
Constitucional Federal Alemán el año de 1956.

Para Pedro Vega García, a través de la teoría del Drittwirkung, se pretende abrir una vía
razonable para poder asentar el constitucionalismo de la igualdad, otorgando una traducción
efectiva al sistema de derechos reconocidos constitucionalmente en el Estado Social, y que
conforme a la arquitectura jurídica del Estado Liberal de Derecho resultan inoperantes. Por lo
expuesto, a partir de esta visión, se tiene que los derechos fundamentales, informan de contenido
no solamente la esfera pública, sino también todos los actos, cláusulas y contenidos de ámbitos
privados o corporativos, en cualquiera de sus formas o constitución jurídica, por lo tanto, en esta
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 520
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

perspectiva, cualquier vulneración a derechos fundamentales, a partir de la estructuración de


la teoría del Drittwirkung, puede ser oponible también a particulares, siendo en este caso
la petición de amparo constitucional, un mecanismo idóneo para el resguardo de derechos
fundamentales en esferas no públicas.

En el marco de la concepción señalada, es evidente el nuevo alcance que al abrigo de la teoría


del Drittwirkung debe darse al principio de autonomía de la voluntad diseñado en un contexto
demo-liberal, por tanto, en sociedades heterogéneas y plurales como las actuales, considerando
que el corporativismo en cualquiera de sus formas o estructura jurídica, podría atentar contra
derechos fundamentales, es imperante resguardar los mismos a través del control de
constitucionalidad vigente, motivo por el cual, en estos contextos, la eficacia horizontal de los
derechos, alcanza una relevancia política, social y jurídica directamente vinculada con los
postulados del Estado Constitucional y su reconocimiento implica una ruptura a los paradigmas
del Estado Liberal.

En base a los criterios expuestos, cabe señalar que la doctrina antes citada, fue recogida también
por la Corte Constitucional Italiana, en particular en las Sentencias de 9 de julio de 1970 y 26 de
junio de 1979; de la misma forma, el Tribunal Constitucional Español, en su Sentencia 177/1988
de 10 de octubre, asumió la teoría alemana del Drittwirkung y de manera expresa, señaló lo
siguiente: “Ciertamente, el artículo 53.1 del Texto constitucional tan sólo establece de manera
expresa que los derechos fundamentales vinculan a los poderes públicos, pero ello no implica
una exclusión absoluta de otros posibles destinatarios, dado que, como señala la STC 18/1984
'en un Estado social de Derecho no puede sostenerse con carácter general que el titular de tales
derechos no lo sea en la vida social'” (el resaltado es nuestro).

Cabe destacar además, que el Tribunal Constitucional Español, desarrolló la dimensión objetiva
y subjetiva de los derechos fundamentales, expresando que las libertades y derechos
fundamentales actúan como límites materiales que la dignidad humana impone al poder público
y a la colectividad en general, razón por la cual, los actos, negocios o no, con repercusión para
terceros, no podrían desconocer nunca su contenido esencial, así lo establece entre otras las
SSTC 25/1981 de 14 de julio y 101/1983 de 18 de noviembre y 18/1984 de 7 de febrero.
Asimismo, en un contexto latinoamericano, esta concepción fue adoptada también por la
República de Argentina; en ese orden, su más alto Tribunal de Justicia, en el marco del sistema
difuso de control de constitucionalidad asumido por este país, en los casos Siri y Kot, consagró
también la eficacia horizontal de los derechos fundamentales.

Al margen de lo señalado, en una remembranza de jurisprudencia comparada, resulta además de


gran relevancia para la presente problemática, los fallos emanados del Tribunal Supremo de los
Estados Unidos en cuanto a la interpretación de las enmiendas XIV y XV y en particular en la
temática referente a la discriminación racial, en ese contexto, en los casos Smit vs. Allrght
(1944) y Schelley vs. Kremer (1948), se reconoce aunque de manera tácita la eficacia frente a
particulares de derechos civiles y políticos.

En este estado de cosas y luego de la revisión jurisprudencial desarrollada, es pertinente señalar


que en los Estados Contemporáneos, cuyo pilar esencial debe desarrollarse sobre la base de los
postulados del Estado Constitucional, los preceptos y pautas axiomáticas de rango
constitucional, entre ellos los derechos fundamentales y los valores justicia e igualdad
esencialmente, informan de contenido a todos los actos públicos y privados de la vida
social; es decir, en este contexto, se produce el llamado por Guastini “fenómeno de
constitucionalización”, en virtud del cual, en todos los actos públicos y privados de la vida
social heterogénea y plural, se hace plausible el proceso de irradiación de los contenidos
esenciales de los derechos fundamentales y de los valores supremos como ser la justicia e
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 521
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

igualdad. Este efecto de irradiación, constituye además el fundamento de la eficacia


horizontal de los derechos fundamentales.

Ahora bien, corresponde señalar que la validez real y material de la irradiación de los
derechos fundamentales y de los valores justicia e igualdad en la vida social, es decir, en
actos públicos y privados, está garantizada por el principio de razonabilidad, el cual a su
vez constituye un presupuesto esencial para el ejercicio del control de constitucionalidad.

En el orden de ideas desarrollado, debe señalarse que el principio de razonabilidad constituye


un estándar axiológico, que asegura el respeto a los valores imperantes en un determinado
régimen constitucional, por eso, el tratadista argentino Linares, citando a Cossío, afirma que en
axiología jurídica se habla de razonabilidad cuando se busca el fundamento de los valores
específicos del plexo axiológico: solidaridad, cooperación, poder, paz, seguridad, orden y
justicia entre otros.

En el orden de ideas expresado, debe señalarse que todos estos valores, inequívocamente
forman parte del contenido esencial de todos los derechos fundamentales; por tanto, será el
control de constitucionalidad a través del amparo constitucional y a la luz del principio de
razonabilidad, el encargado de la eficacia horizontal y vertical de los derechos y por ende
de la materialización del denominado fenómeno de irradiación antes explicado.

III.1.2. La eficacia horizontal de los derechos fundamentales en el Estado Plurinacional de


Bolivia y la materialización de su irradiación a través del control tutelar de
constitucionalidad

Luego de haber desarrollado el análisis de la eficacia horizontal de los derechos fundamentales


en una perspectiva de derecho comparado, corresponde desarrollar la aplicabilidad de esta tesis
en el ámbito interno; por tal razón, el estudio debe empezar señalando que la fundación de la
República no desconoció el influjo del modelo de Estado demo-liberal, ya que la Constitución
Política del Estado de 1826, plasma un sistema de eficacia vertical de libertades públicas.

La reforma constitucional de 1994 y la parcial de 2004, consagraron la vigencia de un Estado


Social y Democrático de Derecho, en ese marco, el contralor de constitucionalidad tuteló
derechos en relación a particulares, asumiendo de manera tácita la eficacia horizontal de
derechos fundamentales; empero, resulta necesario el desarrollo doctrinal de la teoría de la
Drittwirkung, razón por la cual, en el marco de una razonable teoría de argumentación jurídica,
es imperante su estructuración dogmática a través de la presente Sentencia.

En consonancia con lo señalado, es preciso establecer que la Constitución aprobada mediante


Referendo Constitucional de 2009, no solamente constituye un verdadero modelo constitucional
a la luz de derecho comparado, sino además consagra la vigencia de un nuevo modelo de
Estado, corolario de una superación en todas sus facetas del Estado liberal de Derecho.

En ese orden, la sociedad boliviana se caracteriza no sólo por su heterogeneidad, sino


fundamentalmente por su carácter plural; por tal razón, es de neurálgica importancia destacar
que el pluralismo constituye el elemento fundante del Estado, en ese entendido, debe
precisarse además que una característica esencial del modelo constitucional está dada por el
valor axiomático y dogmático- garantista de la Constitución, aspectos en virtud de los
cuales, el fenómeno de constitucionalización debe efectuarse en la vida social, por lo que los
valores supremos como ser la igualdad y la justicia, como elementos del contenido esencial de
todos los derechos fundamentales, deben impregnar de contenido y límite a todos los actos de la
vida social.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 522
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El valor axiomático y dogmático-garantista de la nueva Norma Fundamental, constituye


precisamente el fundamento esencial para sustentar la aplicación no solamente vertical sino
también horizontal de los derechos fundamentales en el marco del nuevo modelo del Estado
Plurinacional de Bolivia.

Además, en el nuevo orden constitucional, la aplicación horizontal de los derechos


fundamentales encuentra génesis directa en la parte dogmática de la Constitución Política del
Estado, en particular, en el art. 109.1 que consagra el principio de aplicación directa de la
Constitución.

En efecto, el principio de aplicación directa de la Constitución, obliga al contralor de


constitucionalidad a materializar el fenómeno de irradiación de esta Constitución
axiomática y dogmático-garantista, por tanto, el ejercicio del control de constitucionalidad
para la eficacia horizontal y vertical de derechos fundamentales, podrá efectuarse a la luz
del principio de razonabilidad, como estándar axiomático, destinado a materializar los
valores de igualdad y justicia que se encuentran dentro del contenido esencial de los
derechos fundamentales reconocidos por el Estado Plurinacional de Bolivia.

En el marco de lo señalado, cabe precisar que los valores de justicia e igualdad como estándar
axiomático y presupuesto para el ejercicio del control tutelar de constitucionalidad
destinado a asegurar la eficacia horizontal y vertical de los derechos fundamentales, tienen
génesis directa en el valor supremo del Estado, que es el “vivir bien”, valor inserto en el
preámbulo de la Constitución Política del Estado, a partir del cual deben ser entendidos los
valores ético-morales de la sociedad plural, plasmados en los dos parágrafos del art. 8 de la CPE.

Por lo señalado, debe colegirse que el paradigma axiomático y dogmático-garantista


característico del modelo constitucional imperante en el Estado Plurinacional de Bolivia,
constituye el sustento para la eficacia no sólo vertical sino también horizontal de los derechos
fundamentales, razón por la cual, tal como se desarrollará infra, el derecho al sufragio, en el
marco del nuevo orden constitucional, podrá tener una exigibilidad en relación a corporaciones
que no tengan naturaleza pública.

III.1.3. Contenido esencial del derecho al sufragio y su tutela constitucional

El art. 410.II de la CPE, asume la teoría del bloque de constitucionalidad y consagra el principio
de supremacía constitucional, señalando que: “…El bloque de constitucionalidad está integrado
por los Tratados y Convenios Internacionales en materia de Derechos Humanos y las normas de
Derecho Comunitario, ratificados por el país…”.

En una interpretación a la luz del principio de “unidad constitucional”, considerando que tal
como ya se dijo, la Constitución Política del Estado se caracteriza por ser axiomática y
dogmático-garantista, para que se materialice el fenómeno de constitucionalización e irradiación
del orden constitucional en todos los actos públicos y privados de la vida social, debe señalarse
con precisión que el bloque de constitucionalidad que plasmará el orden constitucional
imperante y que se encontrará amparado por el principio de supremacía constitucional, estará
compuesto por los siguientes compartimentos: 1) La Constitución Política del Estado como texto
positivizado; 2) Los Tratados Internacionales referentes a Derechos Humanos; 3) Las normas de
derecho comunitarias; y, 4) Los principios y valores supremos. Compartimentos que deberán
irradiar de contenido a todos los actos tanto públicos como privados de la vida social.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 523


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el marco de lo señalado, debe establecerse que el derecho al sufragio, es un derecho


fundamental inserto en el bloque de constitucionalidad; en ese sentido, corresponde ahora
desarrollar su contenido esencial.

En ese orden, a la luz de la teoría de los Derechos Humanos, este derecho está comprendido en
los llamados “Derechos Políticos”, por cuanto el art. 25 del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, señala: “Todos los ciudadanos gozarán (…) de los siguientes derechos y
oportunidades: (…) b) Votar y ser elegidos en elecciones periódicas, auténticas, realizadas por
sufragio universal e igual y por voto secreto que garantice la libre expresión de la voluntad de
los electores”. Asimismo, el art. 23 en su numeral 1 inciso b) de la Convención Americana de
Derechos Humanos señala: “Todos los ciudadanos deben gozar de los siguientes derechos y
oportunidades: b) de votar y ser elegidos en elecciones periódicas, auténticas, realizadas por
sufragio universal e igual y por voto secreto que garantice la libre expresión de la voluntad de
los electores”. De la misma forma, el art. 26.II de la CPE, en su numeral segundo, reconoce el
derecho al sufragio.

Ahora bien, a través de la doctrina del bloque de constitucionalidad en sus compartimentos


precedentemente desarrollados, se establece que dentro del contenido esencial o núcleo del
derecho al sufragio se encuentran dos elementos esenciales: i) El derecho al sufragio activo,
es decir el derecho a elegir; y, ii) El derecho al sufragio pasivo, es decir el derecho a ser
elegido. Asimismo, de acuerdo al último compartimento del bloque de constitucionalidad
conformado por principios y valores de rango constitucional, se establece que a la luz del
principio de razonabilidad, se encuentran también insertos en el contenido esencial de este
derecho los valores de justicia e igualdad.

Precisamente los elementos señalados que forman parte del contenido esencial del derecho al
sufragio, caracterizan al Estado Constitucional y están directamente ligados con la vigencia de la
Cláusula Democrática.

Además, en el marco de la teoría de la Drittwirkung, desarrollada precedentemente y de acuerdo


a una interpretación extensiva, progresiva y favorable de los derechos fundamentales con
génesis en los arts. 13.IV y 256 de la CPE, concordantes con el 29 de la Convención Americana
de Derechos Humanos, debe establecerse que los aspectos insertos en el contenido esencial
del derecho al sufragio, tienen eficacia no solamente vertical, es decir en relación a entes
públicos, sino también tienen eficacia horizontal en relación a particulares.

Por lo expuesto y en estricta coherencia con el objeto y causa de la presente petición de tutela, es
pertinente “defragmentar” dos elementos del contenido esencial del derecho al sufragio, es decir,
el derecho al sufragio pasivo y los valores de justicia e igualdad.

En ese contexto, debe señalarse que el derecho al sufragio pasivo, es un derecho individual cuyo
elemento esencial es la “condición de elegibilidad” que asegurará el respeto a la voluntad
electora para su representación indirecta.

Por lo expresado, de acuerdo a la teoría del contenido esencial de los derechos fundamentales,
en virtud de la cual los alcances de los elementos que configuran el núcleo duro de estos
derechos no puede ser alterado, limitado ni restringido, se colige que establecer el presupuesto
de “elegibilidad”, para no atentar contra los valores de justicia e igualdad y por tanto para
no afectar el principio de razonabilidad, cualquier interpretación de requisitos o
condiciones impuestas para este efecto, debe ser siempre extensiva, favorable y de acuerdo
a los arts. 13.IV y 256 de la Constitución, concordantes con el 29 de la Convención
Americana de Derechos Humanos, disposiciones del bloque de constitucionalidad que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 524
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

plasman el principio de favorabilidad para la interpretación de derechos fundamentales y


que además aseguran la constitucionalización e irradiación de la Constitución axiomática y
dogmático-garantista.

En el marco de lo señalado, debe establecerse además que la afectación al derecho al sufragio en


su contenido esencial, ya sea en el ámbito público o privado, debe ser tutelado por la garantía
jurisdiccional del amparo constitucional disciplinada por el art. 128 de la CPE, como medio
idóneo para su defensa, aspecto que asegurará de manera eficaz el cumplimiento del mandato
inserto en el art. 25 de la Convención Americana de Derechos Humanos.

III.2. El derecho de petición a la luz de la eficacia horizontal de los derechos


fundamentales

Con la finalidad de asegurar una estricta coherencia con el objeto y causa de la presente solicitud
de tutela, toda vez que el segundo derecho denunciado como vulnerado versa sobre el derecho
de petición, corresponde ahora desarrollar el “contenido esencial” de este derecho, a la luz de la
eficacia horizontal de los derechos fundamentales.

En este sentido, realizando una remembranza jurisprudencial, debe señalarse que el entonces
Tribunal Constitucional, a través de la SC 0820/2006-R de 22 de agosto, generó subreglas para
la tutela del derecho de petición en relación a particulares, disponiendo dos requisitos para la
activación de este mecanismo tutelar: a) La viabilidad de la tutela por vulneración al derecho de
petición cuando se trata de una institución privada encargada de prestar un servicio público a la
comunidad; y, b) Para los supuestos en los cuales la persona jurídica ejerza funciones de
autoridad y en mérito a esta calidad asuma decisiones que puedan vulnerar derechos.

Asimismo, ya en el marco del orden constitucional vigente, a través de la SC 1500/2010-R de 11


de octubre, se interpretó el art.24 de la CPE y en lo referente a la oponibilidad del derecho de
petición frente a personas, agrupaciones o entidades de carácter particular, taxativamente se
expresó lo siguiente: “…por el principio de favorabilidad y carácter expansivo de los derechos
fundamentales, y dado el núcleo esencial, que es hacer conocer una petición o pretensión de
manera clara y concreta (…), el derecho de petición no es únicamente exigible a funcionarios
o autoridades públicas, sino también frente a un ente privado o particular o ante una
autoridad u organización que aglutina a determinado grupo social, cuando de su respuesta o
postura asumida a la petición, dependa una situación jurídica o el ejercicio de un derecho”
(el resaltado es nuestro).

De la jurisprudencia glosada, se infiere que la interpretación inicial realizada en cuanto al


derecho de petición, es restrictiva, porque limita su protección a organismos privados que
prestan servicio público o que ejerzan funciones de autoridad en virtud de la cual, puedan asumir
decisiones que afecten derechos (SC 0820/2006-R de 22 de agosto).

Sin embargo, la referida SC 1500/2010-R, en su ratio decidendi establece la posibilidad de


exigibilidad del derecho de petición en relación a particulares, ampliando así el alcance de la SC
0820/2006-R, aplicando por ende, de manera tácita la teoría del Drittwirkung. Con estos
antecedentes, en una nueva contextualización de este derecho acorde con las bases teóricas
referentes a la dogmática de la eficacia horizontal de los derechos fundamentales, expresamente
desarrollada en el Fundamento Jurídico III.1 de la presente Sentencia, corresponde además
señalar que el sustento de la interpretación extensiva que debe dársele al art. 24 de la CPE,
es la teoría del Drittwirkung; por esta razón, esta disposición constitucional, no se limita a
la simple eficacia vertical de este derecho, así en su tenor literal, esta norma establece: “Toda
persona tiene derecho a la petición de manera individual o colectiva, sea oral o escrita y a la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 525
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

obtención de respuesta formal y pronta. Para el ejercicio de este derecho no se exigirá más
requisito que la identificación del peticionario”.

A partir de esta perspectiva, se tiene que el “contenido esencial” del derecho de petición, para su
oponibilidad horizontal o vertical, estará integrado por los siguientes elementos: 1) La petición
de manera individual o colectiva, verbal o escrita; 2) La obtención de respuesta, sea esta
favorable o desfavorable; 3) La prontitud y oportunidad de la respuesta; y 4) La respuesta en el
fondo de la petición; elementos que ya fueron plasmados en las SSCC 1742/2004-R y
0684/2010-R, entre muchas otras.

Ahora bien, considerando que uno de los elementos del contenido esencial del derecho de
petición es la obtención de respuesta, en el ámbito de la eficacia horizontal del derecho de
petición, debe resaltarse que el fundamento de este elemento, precisamente es la certidumbre,
por tanto, en virtud a un análisis sociológico con relevancia jurídica, inequívocamente este
aspecto en una perspectiva horizontal y vertical, constituye el mecanismo de consolidación de la
tan ansiada paz social, que en el marco del art. 10 de la CPE, es un fin esencial del Estado
Plurinacional de Bolivia.

Finalmente, debe establecerse también que la afectación al derecho a la petición en su contenido


esencial, ya sea en el ámbito público o privado, debe ser tutelada por la acción de amparo
constitucional regulada en el art. 128 de la CPE.

III.3. Análisis del caso de autos

Una vez desarrollados los problemas jurídicos planteados, corresponde realizar el análisis del
acto denunciado como lesivo a los derechos al sufragio y a la petición del accionante, razón por
la cual, debe efectuarse las siguientes consideraciones:

En primer lugar, debe señalarse que COTAP LTDA., es una persona jurídica sujeta al régimen
organizacional cooperativista, cuyo objetivo es la prestación de un servicio público como es el
de telefonía; en ese orden, se encuentra sujeta a un bloque de legalidad, conformado entre otros
por su Estatuto Orgánico y su Reglamento de Elecciones, aprobados el año 2008 y en noviembre
de 2001, respectivamente.

Del contenido de ambos documentos, se establece lo siguiente: i) El artículo primero del


Reglamento de Elecciones establece que el Comité Electoral “Es la autoridad máxima en todo lo
relativo al acto eleccionario y sus decisiones serán irrevisables e inapelables y necesariamente
enmarcadas dentro de lo prescrito en la Constitución Política del Estado, Ley General de
Cooperativas, el Estatuto Orgánico de COTAP LTDA. y sus reglamentos”. Por lo expresado,
considerando que esta instancia expide la Resolución 001/2011 de 15 de diciembre, acto
denunciado como lesivo, es evidente que en la especie, no existe medio alguno de impugnación,
razón por la cual, el accionante cumple con el principio de subsidiaridad, y por las fechas de la
indicada decisión y en consideración a la de interposición de la presente acción, se evidencia
también que se cumple con el principio de inmediatez; asimismo, se establece que tanto las
personas demandadas como el accionante tienen legitimación pasiva y activa respectivamente,
por tanto, en mérito a la verificación de estos requisitos, es viable el análisis de fondo de la
problemática.

Ahora bien, es menester señalar que el accionante, afirma que la Resolución 001/2011 de 15 de
diciembre, suscrita por los miembros del Comité Electoral, lo inhabilita del proceso de elección
de miembros al Consejo de Administración y Vigilancia, por no cumplir con la antigüedad de
tres años exigida por la normativa interna. En ese sentido, este acto es calificado como ilegal por
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 526
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

el accionante, porque considerando que la elección se encontraba programada para el día sábado
21 de enero de 2012, en su caso, el 19 de diciembre de 2011, se hubiera cumplido con los tres
años exigidos por la normativa imperante.

En ese contexto, en principio, debe señalarse que el art. 49 inc. a) del Estatuto Orgánico de la
Cooperativa, señala lo siguiente: “Para ser elegido miembro del Consejo de administración se
requiere: a) Ser socio de la Cooperativa con un mínimo de tres años de antigüedad y haber
pagado la totalidad del valor del certificado de aportación”. De la misma manera, se advierte que
el art. 20 inc. a) del Reglamento de Elecciones, desarrolla el mismo tenor literal del art. 49 del
Estatuto Orgánico.

En este marco, de la compulsa de antecedentes, se evidencia que la Resolución cuestionada,


inhabilita al ahora accionante invocando la aplicación del art. 20 del Reglamento de Elecciones
de COTAP Ltda.; en ese orden, considerando que la acción de amparo constitucional tiene la
finalidad de tutelar y resguardar derechos fundamentales, debe realizarse las siguientes
consideraciones:

a) Tal como se dijo en el Fundamento Jurídico III.1.2 de la presente Sentencia, el principio de


aplicación directa de la Constitución Política del Estado, obliga al contralor de
constitucionalidad a materializar el fenómeno de irradiación de esta Constitución axiomática y
dogmático-garantista, por tanto, el ejercicio del control tutelar de constitucionalidad para la
eficacia horizontal de derechos fundamentales, podrá efectuarse a la luz del principio de
razonabilidad, como estándar axiomático, destinado a materializar los valores de igualdad y
justicia que se encuentran dentro del contenido esencial de los derechos fundamentales
reconocidos por el Estado Plurinacional de Bolivia. En ese orden, el principio de razonabilidad,
constituye en la especie el límite y el parámetro para el ejercicio del control tutelar de
constitucionalidad en relación a la Resolución 001/2011, suscrita por el Presidente,
Vicepresidente, Secretaria y Vocales del Comité Electoral de COTAP Ltda., autoridades ahora
demandadas.

b) El derecho al sufragio, en el marco del nuevo modelo constitucional, de acuerdo al


Fundamento Jurídico III.1.2, no solamente puede ser oponible frente a los poderes públicos, sino
también en relación a particulares, en este caso, en relación a una persona jurídica organizada
bajo el régimen societario cooperativista, como es el caso de COTAP Ltda.

c) Tal como se establece en el Fundamento Jurídico III.1.3, el derecho al sufragio pasivo, que es
parte del contenido esencial del derecho al sufragio, encuentra sentido en el elemento de
“elegibilidad”, que interpretándolo teleológicamente constituye el presupuesto que asegura la
formación de la voluntad cooperativa; en ese marco, a la luz de los principios de justicia e
igualdad, que configuran el elemento de razonabilidad, debe darse una interpretación extensiva y
favorable a los requisitos insertos en los arts. 49 del Estatuto Orgánico y 20 del Reglamento de
Elecciones, por lo que de acuerdo al principio de razonabilidad, los tres años de antigüedad,
deben ser computados hasta el momento de la elección y no con anterioridad, puesto que como
se dijo, la elegibilidad y el acto de elección propiamente tal, es el presupuesto para la formación
de la voluntad cooperativa.

d) De acuerdo al Fundamento Jurídico III.2.3, para no atentar contra los valores de justicia e
igualdad y por tanto no afectar el principio de razonabilidad, cualquier interpretación de
requisitos o condiciones de acceso a la formación de la voluntad cooperativa, debe ser siempre
extensiva, favorable y de acuerdo a los arts. 13.IV y 256 de la CPE, concordantes con el 29 de la
Convención Americana de Derechos Humanos, disposiciones del bloque de constitucionalidad
que plasman el principio de favorabilidad para la interpretación de derechos fundamentales y
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 527
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que además, aseguran la constitucionalización e irradiación de la Constitución axiomática y


dogmático-garantista. En la especie, la decisión plasmada en la Resolución 001/2011, atenta
contra el principio de razonabilidad, cuyos elementos, es decir, la igualdad y la justicia, forman
parte del contenido esencial del derecho al sufragio en su faceta pasiva.

e) De conformidad con el Fundamento Jurídico III.2, el derecho de petición tiene no sólo una
eficacia vertical sino también horizontal; en ese contexto, dentro del contenido esencial de este
derecho, se encuentran los siguientes elementos: i) La petición expresa verbal o escrita ya sea de
manera individual o colectiva; ii) La obtención de respuesta, sea esta favorable o desfavorable;
iii) La oportunidad y prontitud de la respuesta; y, iv) La respuesta en el fondo de la petición. En
el caso de autos, se evidencia que por memorial de 19 de diciembre de 2011, el accionante
impugnó la Resolución 001/2011, solicitando su habilitación como candidato a los comicios
electorales (fs. 11), en mérito a esta petición, por nota C.E. 054/2011 de 20 de diciembre, el
Comité Electoral, hace conocer al ahora accionante, la ratificación de la Resolución impugnada,
decisión que fue recepcionada por el peticionante de tutela el 21 del citado mes y año (fs. 10).

En mérito a los antecedentes expuestos, se colige que en la especie no existió vulneración al


derecho de petición, puesto que el accionante, recibió en cuanto al fondo de solicitud una
respuesta oportuna; en ese orden, la desfavorabilidad de la respuesta, tal como se mencionó, no
implica de ninguna manera vulneración al derecho de petición.

De todo lo expuesto, se concluye que el Tribunal de garantías, al conceder la tutela también en


relación al derecho de petición, no compulsó correctamente la causa.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley 027
del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º APROBAR en parte la Resolución 01/2012 de 6 de enero, cursante de fs. 32 a 34 vta.,


pronunciada por la Sala Civil Comercial y Familiar del Tribunal Departamental de Justicia de
Potosí; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, en lo referido al derecho al
sufragio en su faceta pasiva.

2º DENEGAR la tutela en lo relacionado con el derecho a la petición.

3º Se ordena a Secretaría General la difusión de la presente Sentencia en las diferentes Salas del
Tribunal Constitucional Plurinacional; y, juzgados y tribunales de garantías del Estado
Plurinacional de Bolivia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 528


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0086/2012


Sucre, 16 abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00037-2012-01-AAC
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución 01/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 44 a 46 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Alberto Daniel Vásquez
Vásquez contra Gilberto Montero Ramos, Alcalde Municipal de Santiago de Cotagaita de
la provincia Nor Chichas del departamento de Potosí.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 10 de enero de 2012, cursante de fs. 23 a 24, el accionante expone
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Mediante memorándum de 3 de enero de 2011, fue designado como Relacionador Público del
Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita, ejerciendo dicho cargo con normalidad,
dedicación y responsabilidad, incluso ad honórem y excediendo el horario de oficina; sin
embargo, bajo un supuesto abandono de sus funciones por más de seis días consecutivos,
además de endilgársele responsabilidad por daño económico al Estado y estafa al referido
Municipio, -incurriendo en las causales de destitución señaladas en el art. 41 inc. f) del Estatuto
del Funcionario Público (EFP)-, fue destituido “en fecha 06 de junio”, sin dársele oportunidad
de oponerse a la decisión asumida por la autoridad edil demandada, no obstante que su
inasistencia fue tan sólo por cuatro días, primero con autorización verbal y luego por motivos de
salud justificados.

Luego de varios intentos fallidos de entrevistarse con el Alcalde, el 13 de junio de 2011, se le


comunicó que ya no trabajaba en dicha institución, con el añadido que esta autoridad se negó a
leer los justificativos presentados por el accionante y obviar las posteriores solicitudes de
reincorporación que formuló. Frente a esta situación, el 1 de agosto del mismo año, acudió al
Ministerio de Trabajo en la ciudad de La Paz, instancia que al constatar la violación de derechos
y garantías, a través de la Dirección General de Servicio Civil, por oficio 007/2011, conminó
que dentro de los cinco días siguientes a su notificación, la autoridad demandada debía
reincorporar al accionante en las funciones que ejercía.

A pesar de estos antecedentes, el Alcalde del referido Municipio, obvió la conminatoria referida,
como también se negó a dar respuesta formal y oportuna a las dos solicitudes ulteriores que el
accionante presentó; soslayando además que, en ese entonces, el accionante gozaba de
inamovilidad laboral, al ser progenitor de una menor de tan sólo dos meses de edad, conforme
prevé el Decreto Supremo (DS) 0012 de 19 de febrero de 2009.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 529
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, alega la vulneración de sus derechos a “la obtención de respuesta formal y


pronta” y la inamovilidad laboral, citando al efecto los arts. 24 y 48.VI de la Constitución
Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se le conceda la tutela y en consecuencia, disponga la inmediata restitución a su fuente


laboral, así como el cumplimiento -por parte del Municipio- de la provisión de beneficios y
derechos reconocidos por ley a favor de la menor y el pago con carácter retroactivo de sus
haberes desde la fecha de su ilegal destitución. Sea con costas, daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Realizada la audiencia pública de consideración de la acción de amparo constitucional, el 12 de


enero de 2012, en presencia del accionante, de la autoridad demandada -ambos acompañados
por sus abogados patrocinantes- y del representante del Ministerio Público, según consta en el
acta cursante de fs. 42 a 44, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante, en audiencia ratificó el tenor íntegro de la acción de amparo


constitucional interpuesta y aclaró que la destitución de su defendido no se concretó
formalmente sino que fue verbal.

En ejercicio de su derecho a la réplica, indicó que los argumentos expuestos en el informe de la


contraparte, fueron presentados ante el Ministerio de Trabajo a través de la Dirección de
Servicio Civil, instancia que los valoró en el marco del régimen laboral y concluyó
estableciendo que la inasistencia de Alberto Daniel Vásquez Vásquez se justificó plenamente,
por lo que se ordenó la restitución a su fuente laboral a través del oficio de 17 de octubre de
2011, fecha a partir de la cual debe computarse el plazo para la interposición de la acción de
amparo constitucional. Por otro lado, afirmó que está en proceso de investigación la presunta
comisión de los delitos que se atribuyen a su defendido, por lo que esta circunstancia no debiera
incidir en su retiro de la entidad municipal.

En su última intervención, el abogado del accionante destacó que si bien existe un


procedimiento “para la destitución en el mismo reglamento” (sic), debe tomarse en cuenta la
fecha de conminatoria ordenada por el Ministerio de Trabajo y la última solicitud de
reincorporación formulada por su defendido, que data del 25 de octubre de 2011, a efectos de
computar el plazo de interposición de la presente acción.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El demandado Alcalde Municipal de Santiago de Cotagaita, a través del memorial cursante a fs.
41 y vta. y en su intervención en audiencia, afirmó lo siguiente: a) Por memorándum de 9 de
junio de 2011, se comunicó a Alberto Daniel Vásquez Vásquez, el cese de sus funciones y
ruptura de la relación laboral con el referido Gobierno Municipal, por abandono de funciones
por más de seis días hábiles, -del 31 de mayo al 9 de junio de ese año-, en franca contravención
del Reglamento Interno, en sus arts. 18.4 incs. c) y d) y 26.5 inc. c), concordante con los arts.
72.6 de la Ley de Municipalidades (LM) y 41 inc. f) del EFP; b) No pudo atender los
justificativos formulados por el accionante, debido a su “apretada agenda” y porque tuvo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 530
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conocimiento de la causal de la destitución según informe elevado por el responsable de


Recursos Humanos del Municipio; c) No existió lesión alguna a derechos y garantías
constitucionales, por cuanto fue el propio funcionario quien se alejó de la institución al
abandonar su trabajo; actitud reiterada que consta en sus tarjetas de asistencia y fue determinante
para su despido, además que su obligación de concurrir a su fuente laboral no puede eludirse ni
justificarse por su condición de progenitor de una menor de un año; y, d) Finalmente,
corresponde denegarse la tutela al ser evidente que la acción se interpuso fuera de los seis meses
previstos al efecto, según establecen los arts. 219.II de la CPE y 59 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional (LTCP), al constar que el acto impugnado es el memorándum de 9
de junio de 2011 y el memorial de amparo constitucional se presentó el 10 de enero de 2012.

En la dúplica, reiterando la extemporaneidad de la acción de defensa interpuesta, el abogado de


la parte demandada enfatizó que el accionante -en su calidad de funcionario público- se sujeta a
la Ley de Municipalidades, razón por la que el Ministerio de Trabajo no tiene tuición para
ordenar su reincorporación al Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita. Por otro lado,
aclaró que la causal de despido fue la inasistencia del accionante a su fuente laboral por más de
tres días, en el marco del Reglamento Interno de dicho Municipio y la mencionada Ley; no así,
la investigación de los delitos que presuntamente cometió y que se sustancia en el “Juzgado de
Instrucción”. Finalmente, insistió en que los servidores públicos no se sujetan a la Ley General
del Trabajo, resultando inocua la determinación del Ministerio de Trabajo; en ese entendido,
debe tomarse en cuenta la fecha del memorándum de destitución.

1.2.3. Intervención del representante del Ministerio Público

En uso de la palabra, la autoridad fiscal destacó que no cursa en obrados “la carta de despido”,
como tampoco la baja médica que justifique la inasistencia del accionante a su fuente laboral;
estas circunstancias, sumadas a que el interesado no opuso contra el memorándum de despido el
recurso de revocatoria previsto en el Estatuto del Funcionario Público y acudió a instituciones
propias de materia laboral, permiten concluir que corresponde denegarse la tutela, resultando
evidente la extemporaneidad de interposición de la acción de amparo constitucional.

I.2.4. Resolución

El Juez de Partido Mixto, Liquidador y de Sentencia de Santiago de Cotagaita del Distrito


Judicial de Potosí, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 01/2012 de 12 de
enero, cursante de fs. 44 a 46 vta., por la que denegó la acción de amparo constitucional,
imponiendo costas al impetrante, bajo los siguientes fundamentos: i) De los arts. 66 y 75 del
EFP, se establece un procedimiento administrativo para la tramitación de reclamos referidos a
situaciones relativas al ingreso, promoción y retiro de la carrera administrativa, especificándose
-en primera instancia- al recurso de revocatoria, que se interpone ante la misma autoridad que
hubiese dictado la decisión objetada y su posterior jerárquico, ante el Superintendente del
Servicio Civil; circunstancia también prevista en el DS 26115 de 16 de marzo de 2001, que -en
el caso concreto- supone el agotamiento de la vía administrativa; ii) Sin embargo, no se cuenta
con “elementos de convicción que lleven a la certeza” (sic) que el accionante agotó todos los
recursos que le franquea la ley en la vía correspondiente, quien acudió directamente ante el
Servicio Civil dependiente del Ministerio de Trabajo; a más de ello, resulta evidente que la
acción de defensa se presentó luego de más de siete meses de cometido el acto lesivo que
denuncia -de 9 de junio de 2011-, por lo que tampoco resulta suficiente la supuesta inamovilidad
laboral de la que gozaría; y, iii) El solo certificado de salud no constituye baja médica que
justifique la inasistencia del accionante a su fuente laboral.

II. CONCLUSIONES
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 531
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se concluye lo


siguiente:

II.1. Cursa a fs. 1, el memorándum de designación de cargo de 3 de enero de 2011, indicando


que por decisión de la Máxima Autoridad Ejecutiva (MAE) del Gobierno Municipal de
Cotagaita, se asigna a Alberto Daniel Vásquez Vásquez, en el cargo de Relacionador Público de
dicha entidad; documento suscrito por la autoridad demandada.

II.2. Por informe de 8 de junio de 2011, elevado por el Coordinador General y Responsable de
Recursos Humanos al Alcalde Municipal de Santiago de Cotagaita, se comunicó que Alberto
Daniel Vásquez Vásquez, hizo abandono de sus funciones laborales desde el 31 de mayo hasta
la indicada fecha, transgrediendo “el reglamento interno de la institución”, que concuerda con el
art. 72.6 de la LM (fs. 28).

Al día siguiente, la referida autoridad edil emitió el memorándum de agradecimiento de


funciones que cursa a fs. 27, comunicando al accionante que -al amparo de la atribución
conferida por el art. 44.6 de la LM- se prescindía de sus servicios en el Gobierno Municipal de
Santiago de Cotagaita; decisión asumida sobre la base del informe descrito anteriormente, cuyo
contenido consta en las tarjetas de asistencia de Alberto Daniel Vásquez Vásquez, que no
registran su concurrencia a su fuente laboral (fs. 31 a 32).

II.3. Bajo el mismo tenor del memorial de amparo constitucional, además de enfatizar su calidad
de progenitor de una menor de dos meses de edad y añadir incluso que no se le pagó por otros
servicios que prestó al Municipio de Santiago de Cotagaita, como tampoco se le otorgó el
beneficio de lactancia, Alberto Daniel Vásquez Vásquez se dirigió a la autoridad demandada,
solicitando la reincorporación a su fuente de trabajo, a través de los escritos de 27 de junio, 6 de
julio y 1 de agosto de 2011, sin que conste respuesta alguna del requerido (fs. 7 a 9; 10 a 12; y
17 a 18 -respectivamente-).

II.4. A través de la comunicación 007/2011 de 17 de octubre, cursante de fs. 4 a 6, el Director


General de Servicio Civil del Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, conminó a la
reincorporporación de Alberto Daniel Vásquez Vásquez en el cargo que desempeñaba en el
Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita, sobre la base de lo dispuesto en el Artículo Único
del DS 0496 de 1 de mayo de 2010, que complementa al art. 6 del DS 0012 de 19 de febrero de
2009, otorgando a la autoridad demandada, el plazo de cinco días hábiles a partir de su
notificación para que haga efectivo lo dispuesto.

En cartas posteriores de 25 de octubre, 9 y 18 de noviembre de 2011, el accionante solicitó al


Alcalde Municipal, dé cumplimiento a lo determinado por el Director General de Servicio Civil
del Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social (fs. 14, 13 y 15, respectivamente).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Por supuestamente no haber acudido a su fuente de trabajo por más de tres días seguidos y con
ello, incurrido en las causales señaladas en el art. 41 inc. f) del EFP, el 6 de junio de 2011,
Alberto Daniel Vásquez Vásquez fue destituido de su cargo de Relacionador Público del
Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita, no obstante que su inasistencia fue tan sólo por
cuatro días, primero con autorización verbal y luego por motivos de salud plenamente
justificados, obviándose además la inamovilidad laboral de la que goza en su condición de
progenitor de una menor de dos meses de edad. Ante esta ilegalidad, el accionante acudió en
varias oportunidades ante la autoridad edil demandada, solicitando su restitución y posterior
cumplimiento de la conminatoria emitida por el Director General de Servicio Civil del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 532
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, que exhortó la reincorporación del accionante
en las funciones que ejercía; sin embargo, el Alcalde demandado hizo caso omiso de dicha orden
y rehusó dar respuesta a sus constantes peticiones. En consecuencia, corresponde dilucidar en
revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, prevista por el art. 128 de la CPE, se instituye por la Ley
Fundamental vigente, como una acción tutelar de defensa contra actos u omisiones ilegales o
indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan,
supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la misma Norma
Fundamental y la ley. Conforme esta precisión, se advierte el contenido del art. 73 de la LTCP.

Es así que, la Norma Fundamental enfatiza que esta acción tutelar puede presentarse por la
persona “…que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad
correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente,
siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados” (art. 129.I de la CPE).

III.2. Inamovilidad laboral de las mujeres en estado de embarazo y de los progenitores,


hasta que la hija o el hijo cumplan un año de edad

Del nuevo orden constitucional, se infiere su particularidad de disciplinar políticas a favor de


sectores vulnerables que necesitan de una protección reforzada por parte del Estado, que debe
procurar la validez plena y efectiva de sus derechos; es así que, como valores estructurales del
Estado Plurinacional de Bolivia, la “igualdad” y la “justicia” sustentan la matriz axiológica a
partir de la cual el constituyente boliviano diseñó políticas afirmativas a favor de la mujer
trabajadora en estado de gestación y lactancia, como de los progenitores, hasta que la hija o el
hijo cumplan un año de edad.

En efecto, el art. 48.VI de la CPE, señala que: “Las mujeres no podrán ser discriminadas o
despedidas por su estado civil, situación de embarazo, edad, rasgos físicos o número de hijas o
hijos, se garantiza la inamovilidad laboral de las mujeres en estado de embarazo, y de los
progenitores, hasta que la hija o el hijo cumpla un año de edad” (negrillas añadidas).
Precepto constitucional que converge en una política constitucional positiva que, a
entendimiento de la jurisprudencia constitucional, resulta en las siguientes reglas: “a) La
prohibición de despido de toda mujer trabajadora en situación de embarazo; b) La
inamovilidad de la mujer trabajadora en gestación y por un lapso de un año de edad; y c) La
inamovilidad del progenitor varón por un lapso de un año, computable desde el nacimiento de
su hijo o hija” (las negrillas fueron agregadas) (SC 1650/2010-R de 25 de octubre). Bajo ese
criterio, se procura, por un lado, evitar la discriminación por la condición de embarazo y, por
otro, garantizar la estabilidad laboral de la mujer trabajadora en estado de gestación y lactancia,
como también del progenitor varón, independientemente de que se tratasen de empleadas (os)
del sector privado, como a funcionarias (os) o servidoras (o) públicas (os); todo esto, en
resguardo de la hija o hijo nacido y hasta su primer año de edad, desde el momento de su
concepción, como sujeto de derechos en todo lo que pudiera favorecerle.

Precisamente, con dicha finalidad y tomando en cuenta los aspectos antes referidos, además del
deber del Estado, la sociedad y la familia, de garantizar la prioridad del interés superior de la
niña, niño y adolescente, -que comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir
protección y socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 533


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

públicos y privados-, es que a través del DS 0012 de 19 de febrero de 2009, complementado por
el DS 0496 de 1 de mayo de 2010, se estableció que:

“I. En caso de incumplimiento de la inamovilidad laboral, a solicitud de la madre y/o padre


progenitores, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social instruirá al empleador
para que cumpla en el plazo máximo de cinco (5) días hábiles a partir de su notificación, la
reincorporación con goce de haberes y otros derechos sociales por el tiempo que dure la
suspensión de la relación laboral.

II. Sin perjuicio de lo dispuesto en el Parágrafo precedente, la afectada o afectado podrá


interponer las acciones constitucionales que correspondan, tomándose en cuenta la inmediatez
de la protección del derecho constitucional de inamovilidad laboral" (las negrillas no forman
parte del texto original).

En ese orden de ideas, resulta incuestionable que se faculta a la madre en estado de gestación y
lactancia, como al progenitor varón, -cuando la hija o hijo fueran menores al año de edad-, el
acudir directamente ante el Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, en resguardo de
su derecho a la inamovilidad, en el caso que se hubiera incumplido la previsión constitucional de
resguardo a su estabilidad laboral. Inclusive, admitiéndose el interponer acciones de defensa de
este derecho ante esta jurisdicción y conforme a los términos descritos en el artículo de
referencia.

III.2.1. Postergación de la sanción impuesta a la mujer embarazada trabajadora y al


progenitor, hasta un año del nacimiento de su hijo o hija

En remisión al art. 48.VI de la CPE, citado en el Fundamento Jurídico que precede, queda claro
que la mujer en estado de gestación o lactancia, no puede ser removida de su puesto de trabajo
hasta que su hijo o hija cumpla un año de edad; previsión constitucional que versa sobre la
protección de la maternidad por parte del Estado, que es extensible al progenitor varón a efectos
de precautelar el derecho a la vida, la salud y a la seguridad social, tanto de la madre como del
recién nacido desde el momento de su concepción.

Así, debe entenderse por el pronunciamiento del Tribunal Constitucional que, cuando en
aquellos casos en los que ambos -madre y progenitor- hubieran sido sometidos a proceso
administrativo, disciplinario y/o determinado su destitución -por incurrir en contravención al
ordenamiento jurídico administrativo y las normas que regulan la conducta funcionaria- dicha
sanción deberá postergarse en tanto su hijo o hija cumpla un año de edad (Con similar intelecto,
la SC 1330/2010-R de 20 de septiembre). De lo que se concluye que, la inamovilidad laboral de
la que gozan la mujer embarazada y en estado de lactancia, como el progenitor varón, implica
que cualquier sanción a imponérsele, la destitución u otra que afecte sus derechos fundamentales
y/o garantías constitucionales o los del nuevo ser, debe posponerse a efectos de garantizar y
precautelar los derechos de carácter primario (salud, vida, seguridad social) que pudieran ser
vulnerados de forma irreparable e irremediable.

III.3. Fundamentos de la tutela solicitada por el accionante

III.3.1. Sobre el derecho a la inamovilidad laboral invocado

En vigencia de la nueva Ley Fundamental, el anterior órgano contralor de constitucionalidad fue


invariable al otorgar la tutela en casos en que la mujer en estado de gestación fuera despedida a
pesar de encontrarse embarazada, -conforme a lo previsto por el art. 48.IV de la CPE y la Ley
975 de 2 de marzo de 1988-, en atención a la protección de la maternidad por parte del Estado,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 534
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

hasta un año del nacimiento del hijo o hija, al estar este aspecto íntimamente relacionado con un
derecho fundamental primario y sobre el cual se sustentan todos los demás, como es el derecho a
la vida de la mujer y del nuevo ser en gestación (por ejemplificar, las SSCC 1043/2010-R,
1076/2010-R, 2095/2010-R y 1200/2010-R, entre otras).

Lo anterior, se sustenta además en el art. 410 de la CPE, que establece la jerarquía normativa al
señalar que la Constitución Política del Estado es la norma suprema del ordenamiento jurídico
boliviano y goza de primacía frente a cualquier otra disposición normativa. En ese entendido, la
previsión del art. 48.VI, es de aplicación preferente frente a cualquier otro criterio, dado que de
manera enfática precisa: “…Se garantiza la inamovilidad laboral de las mujeres en estado de
embarazo, y de los progenitores, hasta que la hija o el hijo cumpla un año de edad”; es decir, la
nueva Ley Fundamental contempla como un derecho constitucional la inamovilidad de la fuente
laboral en los casos de mujeres en estado de gestación y lactancia hasta que su hijo o hija
cumpla un año de edad; circunstancia que se entiende, se hace extensible al progenitor varón
en similar condición que la resaltada.

En ese orden de ideas y pretendida la concesión de la tutela a efectos que se disponga la


inmediata restitución de Alberto Daniel Vásquez Vásquez como relacionador público del
Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita, bajo el alegato de gozar de inamovilidad laboral
en su condición de progenitor de una menor de dos meses de edad, cabe destacar que -conforme
a la documental descrita en la Conclusión II.4- a través de la Comunicación 007/2011, el
Director General de Servicio Civil del Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social,
conminó a la reincorporporación del accionante en el cargo que desempeñaba en el referido
Gobierno Municipal, sobre la base de lo dispuesto en el Artículo Único del DS 0496, otorgando
a la autoridad demandada el plazo de cinco días hábiles a partir de su notificación para que haga
efectivo lo dispuesto.

Sobre la base de esta relación fáctica, destacan los siguientes aspectos:

a) El accionante acudió oportuna e idóneamente ante el Ministerio de Trabajo, Empleo y


Previsión Social, conforme se detalló en el Fundamento Jurídico III.2 de esta Sentencia, en
ejercicio de la facultad conferida por el Artículo Único del DS 0496 que complementa al DS
0012; razón que advierte la interposición de la presente acción de amparo dentro del plazo
previsto al efecto, tomando en cuenta como antecedente último la Comunicación 007/2011 de 17
de octubre, que constituye la resolución administrativa a partir de la cual debe efectuarse el
cómputo de los seis meses que establece el art. 129.II de la CPE, a efectos de la correcta
presentación de esta garantía constitucional luego que se hubieran agotado todos los medios de
impugnación previos a activar a la jurisdicción constitucional.

Es decir que, por un lado, consta que el accionante, al acudir directamente ante el referido
Ministerio, agotó los medios de impugnación a su alcance para hacer valer sus derechos que
invoca lesionados, conforme faculta el DS 0496; y, por otro, interrumpió el cómputo del plazo
de caducidad de seis meses para presentar la acción de amparo.

b) El Director General de Servicio Civil del referido Ministerio, a través de la Comunicación


007/2011, corroboró la condición del impetrante de progenitor de una niña menor al año de
edad, al conminar su reincorporación al Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita,
precisamente con el respaldo de los arts. 13.II, 46.2.II y 48.VI de la CPE y el tenor de los
Decretos Supremos antes mencionados, además del cotejo y “revisión de los antecedentes del
caso” (sic) adjuntos a la solicitud de Alberto Daniel Vásquez Vásquez; y,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 535


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

c) No obstante que el accionante no refrendó documentalmente la edad de su hija a tiempo de


oponer la presente acción, esta circunstancia fue aseverada en su memorial de interposición y no
mereció argumento en contrario que la desestime; a más que, su condición de progenitor fue
ratificada por la autoridad demandada -según detalla el informe respectivo del apartado I.2.2 inc.
c) de esta Sentencia- y se colige de la conminatoria dispuesta por el Director General de Servicio
Civil, a través de la Comunicación 007/2011.

Por todo lo anteriormente expuesto y los antecedentes del caso concreto, corresponde conceder
la tutela solicitada sobre el derecho a la inamovilidad laboral que le asiste al accionante en su
condición de progenitor de una niña cuya edad es menor a un año y la protección conferida por
la Constitución Política del Estado -en su art. 48.VI- y el DS 0496 -que complementa al DS
0012-, sin perjuicio de las sanciones administrativas de las que pudiera ser pasible y que deberán
concretarse luego de cumplido el año de edad de la hija del accionante, siguiendo el
razonamiento expuesto en los Fundamentos Jurídicos III.2 y III.2.1 de esta Sentencia.

III.2.2. Sobre el derecho a la petición

Finalmente, invocado como también conculcado su derecho a “la obtención de respuesta formal
y pronta”, citando al efecto el art. 24 de la CPE, que contiene el derecho a la petición, que se
asume por la jurisprudencia constitucional como la facultad, potestad o capacidad de toda
persona, para acudir ante autoridades o representantes y pedir -de forma individual o colectiva-
la atención de sus necesidades y requerimientos; es decir, se trata de un derecho fundamental de
contenido formal, para cuyo ejercicio basta plasmarlo en forma oral o escrita y su cumplimiento,
comprende una respuesta pronta, oportuna, motivada y fundamentada y no así, necesariamente
favorable al peticionante (razonamiento similar en la SC 0535/2010-R de 12 de julio).

Complementando dicho entendimiento, la SC 1068/2010-R de 23 de agosto, refirió que: “La


Constitución Política del Estado actual ha ubicado a este derecho en el art. 24, dentro de la
categoría de los derechos civiles, pues se entiende que parten de la dignidad de las persona
entendiendo que cuando se aduzca el derecho de petición, la autoridad peticionada, ya sea
dentro de cualquier trámite o proceso, éste tiene el deber respecto al u otros individuos de
responder en el menor tiempo y de forma clara. En resumen las autoridades vulneran el
derecho de petición cuando: a) La respuesta no se pone en conocimiento del peticionario; b) Se
presenta la negativa de recibirla o se obstaculiza su presentación; c) Habiéndose presentado la
petición respetuosa, la autoridad no la responde dentro de un plazo razonable; y, d) La
solicitud no es atendida de manera clara, precisa, completa y congruente con lo solicitado”. En
ese sentido, es necesario referir que dentro del ámbito municipal que configura el contexto en el
que se desarrollan los hechos expuestos por el accionante, el art. 147 de la LM, respecto al
derecho de petición, señala que: “Toda persona natural o jurídica individual o colectivamente,
tiene el derecho de formular peticiones a las autoridades municipales, las que obligatoriamente
deberán ser atendidas. Al efecto, los Gobiernos Municipales reglamentarán los procedimientos y
precisarán plazos para dictar resoluciones”; infiriéndose que, tales petitorios -obligatoriamente-
deben atenderse en forma positiva o negativa por la autoridad ante quien fueron planteados, en
un tiempo y plazo determinado de acuerdo a sus reglamentos y procedimientos, no pudiendo
dejar pendiente su pronunciamiento por tiempo indefinido.

Es así que, verificado que el accionante acudió ante la autoridad demandada en reiteradas
oportunidades solicitando la reincorporación a su fuente laboral en el Gobierno Municipal de
Santiago de Cotagaita, a través de los escritos de 27 de junio, 6 de julio y 1 de agosto de 2011, -
conforme detalla la Conclusión II.3- y posteriormente, adjuntando la comunicación 007/2011 de
17 de octubre, emitida por el Director General de Servicio Civil del Ministerio de Trabajo,
Empleo y Previsión Social (descrita en la Conclusión II.4), mediante cartas de 25 de octubre, 9 y
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 536
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

18 de noviembre del mismo año; destaca que, todas estas interpelaciones formuladas ante el
Alcalde del referido Municipio, no obtuvieron respuesta alguna, más al contrario, esta autoridad
-en audiencia de consideración de la acción de amparo que se revisa- confirmó que no pudo
atender los justificativos formulados por el accionante debido a su “apretada agenda” y porque
tuvo conocimiento de la causal de la destitución según informe elevado por el responsable de
Recursos Humanos del Municipio. Relación fáctica de la que se infiere la vulneración al derecho
a la petición del accionante, quien no obtuvo respuesta pronta, oportuna, motivada y
fundamentada, independientemente que le fuera favorable o no; así, siguiendo el tenor de la
jurisprudencia constitucional cuya cita precede, corresponde concedérsele la tutela también
respecto a este derecho.

Por los fundamentos precedentes, la problemática expuesta por el accionante es susceptible de


protección a través del amparo constitucional; por cuanto el Juez de garantías, al denegar la
tutela, no efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes del caso, ni de los alcances de esta
acción.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud a la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve:

1º REVOCAR la Resolución 01/2012 de 12 de enero, cursante de fs. 44 a 46 vta., pronunciada


por el Juez de Partido Mixto, Liquidador y de Sentencia de Santiago de Cotagaita del Distrito
Judicial de Potosí; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada en los términos
expuestos en la presente Sentencia.

2º DISPONER el cumplimiento por parte del Gobierno Municipal de Santiago de Cotagaita, de


la provisión de beneficios y derechos reconocidos por ley a favor de la menor. Asimismo, en
caso de ser pertinente, se instaure un debido proceso por la falta disciplinaria que se atribuye al
accionante y si fuera a imponérsele una sanción de desvinculación, ésta se difiera al momento
que su hija cumpla un año de edad; sin lugar al pago retroactivo de haberes devengados, los que
serán pagados a partir de su reincorporación.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0087/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00039-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 537


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución 01 de 13 de enero de 2012, cursante de fs. 13 a 16, pronunciada, dentro


de la acción de libertad, interpuesta por Abraham Quiroga Bonilla en representación sin
mandato de Aníbal Martínez Núñez contra Erwin Jiménez Paredes, Juez Cuarto de
Instrucción en lo Penal del Distrito Judicial de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 13 de enero de 2012, cursante de fs. 3 a 4 vta. de obrados, el


representante del accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del sumario investigativo seguido por el Ministerio Público contra Aníbal Martínez Nuñez,
-por la presunta comisión del delito de contrabando-, su representado se encontraba recluido en el
Centro de Rehabilitación Santa Cruz (Palmasola); por lo que, en audiencia solicitó la cesación de
su detención preventiva y al no existir pronunciamiento alguno, el 5 de enero 2012, pidió se fije
nueva audiencia; sin embargo, sostiene que hasta la fecha de presentación de esta acción no fue
respondida su petición.

Argumenta que, el Juez demandado, no señaló la audiencia dentro de las veinticuatro horas y tampoco
fijó la fecha de celebración en el plazo de las setenta y dos horas, y al no existir fundamento para la
negativa de ello, indica que su memorial se encuentra en su despacho por más de ciento sesenta y ocho
horas; vale decir, que no ha resuelto el memorial de mero trámite para indicar el día de audiencia de
cesación, por tanto carece de celeridad procesal, vulnerándose de esta manera los derechos a la libertad y
a la seguridad jurídica de su representado, quien se encuentra detenido en forma ilegal ocasionándole
perjuicios, no sólo en su fuente laboral, sino también en el ámbito familiar, siendo que no cometió dicho
delito, y aún así se le está suministrando un anticipo de cumplimiento de condena sin existir
requerimiento conclusivo.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante por su representante estima vulnerados sus derechos a la libertad, a la locomoción y a


la seguridad jurídica, citando al efecto los arts. 13.I, 23, 125 y 178.I de la Constitución Política del
Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare procedente la acción, ordenándose la celebración y señalamiento de audiencia


dentro de las veinticuatro horas.

I.2.1. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 13 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 11 a
12 y vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante se ratificó in extenso en los mismos términos de la presente acción; sin
embargo, manifestó su extrañeza toda vez que su asistente se apersonó por secretaria del juzgado
correspondiente con el propósito de verificar si salió la respuesta a su memorial y posteriormente
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 538
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

en forma personal acudió a esa misma instancia, donde la auxiliar de dicho juzgado le comunicó
que el memorial referido todavía no había sido resuelto e inclusive revisó el libro diario; empero,
mediante decreto de 6 de enero de 2012, afirma que supuestamente se hubiere despachado tal
solicitud, programando la audiencia de cesación a la detención preventiva para el 20 de enero del
mismo año. En ese sentido, indica que el Tribunal Constitucional en su abundante jurisprudencia,
establece que la justicia debe ser pronta y efectiva en el tema de fijar audiencia específicamente de
la detención preventiva. Por otra parte, refiere que se declare la procedencia de la presente acción y sea
sin costas, ya que se habría subsanado el acto lesivo con el señalamiento de audiencia.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

La autoridad demandada Erwin Jiménez Paredes, Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal del
departamento de Santa Cruz, mediante informe escrito, cursante a fs. 10, manifestó que todo lo
indicado dentro del proceso es falso, puesto que: a) Existen otros tres coimputados que hubieren
presentado sus solicitudes todos los días y si bien el accionante tiene conocimiento que no ha
salido providencia alguna de despacho, esto no se debe a su solicitud, sino a las otras solicitudes
que presentaron los coimputados; b) El memorial que presentó el accionante ha sido decretado en
su oportunidad y de acuerdo al rol de audiencias de ese despacho, la misma se señaló para el 20 de
enero de 2012; y, c) Finalmente, solicita se declare improcedente la presente acción y más al
contrario se le establezca una multa al abogado presentante de la acción por falta a la verdad.

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Sentencia del departamento de Santa Cruz, por Resolución 01 de 13 de enero
de 2012, cursante de fs. 13 a 16, concedió la acción de libertad, condenando a la autoridad
demandada a la reparación de daños y perjuicios; en base a los siguientes fundamentos: 1) Con
relación a la providencia de señalamiento de audiencia que realiza el Juez demandado, indica que
fue resuelta conforme a derecho porque fue pronunciada al día siguiente de la presentación de su
memorial; encontrándose dentro de las veinticuatro horas, conforme a los plazos establecidos en el
art. 130 del Código Procedimiento Penal (CPP); 2) En cuanto a las aseveraciones que realiza el
abogado del accionante, -que no hubiera existido esa providencia-, no se tiene certidumbre de ello
por no haber aportado las pruebas necesarias; 3) En su abundante jurisprudencia el Tribunal
Constitucional, ha establecido en cuanto a las solicitudes de cesación a la detención preventiva, que
deben tener un trámite acelerado y oportuno, en este caso si bien la providencia ha sido emitida en
el plazo que la ley le otorga, la audiencia ha sido fijada quince días después de la solicitud, término
que el Juez de garantías lo encuentra demasiado dilatorio, en razón de que se va a considerar el
derecho a la libertad; 4) Si el Código de Procedimiento Penal y la jurisprudencia constitucional no
establecen un plazo para realizar la audiencia de cesación a la detención preventiva, refiere que se
puede entender que el debido proceso, exige que se efectivice dentro de un plazo razonable; y al
existir varios imputados en el presente caso, refiere que se puede evidenciar que el Juez no otorga
los mismos plazos a todos, vulnerándose así el derecho a la igualdad, establecido en el art. 12 del
CPP; y, 5) Finalmente, indica que se encuentra responsabilidad en la autoridad demandada, por
existir dilación y retraso indebido en la tramitación de cesación a la detención preventiva.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Mediante AC 007/2012-CA/S de 27 de febrero, se suspendió el plazo por solicitud de


documentación, mismo que fue reanudado mediante Decreto Constitucional de 13 de marzo de
2012.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 539


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece que el Juez de
garantías, remitió a este Tribunal como prueba, únicamente el memorial de 5 de enero de 2012, por
el cual Aníbal Martínez Núñez -ahora accionante- solicitó al Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal
del departamento de Santa Cruz -demandado en esta acción-, nueva fecha de audiencia de cesación
a su detención preventiva, por haber mejorado su situación jurídica, conforme lo establece el art.
239.1 del CPP (fs. 2).

En razón a ello, este Tribunal luego de la compulsa de la documentación remitida, en mérito al


cumplimiento del Auto AC 007/2012-CA/S de 27 de febrero, establece lo siguiente:

II.1. Dentro del proceso penal por el presunto delito de contrabando seguido por el Ministerio
Público contra Aníbal Martínez Núñez, conforme a lo aseverado por el accionante en audiencia y
no desvirtuado, más al contrario afirmado por el Juez demandado en su informe, la solicitud de
cesación de detención preventiva de 5 de enero de 2012, mereció el Decreto de 6 de enero del
citado año, por el cual se fijó audiencia para el 20 de enero de 2012. (fs. 11 a 12 vta. y 10).

II.2. Por memorial de 12 de enero de 2012, Roberto Rojas Ríos, dentro del proceso penal que le
sigue el Ministerio Público, por la presunta comisión del delito de contrabando, pidió audiencia de
cesación a la detención preventiva; por lo que, mediante providencia de 13 de enero del mismo
año, el Juez demandando, programó audiencia de cesación para el día jueves 19 de enero de 2012
(fs. 33 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

El accionante considera que el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal del Distrito Judicial de Santa
Cruz, lesionó los derechos a la libertad, a la locomoción y a la seguridad jurídica de su
representado, por cuanto ante las solicitudes de cesación, realizadas primero en la audiencia de
detención preventiva y luego el 5 de enero de 2012, el Juez demandado no señaló audiencia dentro
del plazo de las veinticuatro horas establecidas por ley a través de una resolución expresa,
conforme indicó en su oportunidad la auxiliar de dicho juzgado, quien le comunicó esa situación en
el momento en que se apersonó al mismo; y, no obstante ello, posteriormente, mediante decreto de
6 de enero de 2012 “apareció” fijada la audiencia de consideración de la cesación de detención
preventiva para el 20 de enero del citado año; fecha que fue considerada sin tomar en cuenta el
principio de celeridad. En consecuencia corresponde en revisión, verificar si tales extremos son
evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

La acción de libertad es una de las acciones de defensa que contempla la Constitución Política del
Estado, instituida en el art. 125, que tiene por finalidad garantizar la protección de los derechos a la
vida y a la libertad, que podrá interponerse por toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida o que es indebidamente procesada o privada de su libertad
personal.

La jurisprudencia desarrollada por este Tribunal, estableció a través de la SC 0011/2010-R de 6 de


abril, que: “La acción de libertad, es una acción jurisdiccional de defensa que tiene por finalidad
proteger y/o restablecer el derecho a la libertad física o humana, y también el derecho a la vida, si
es que se halla en peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad personal, sea
disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento de las formalidades legales y/o
la remisión del caso al juez competente, la restitución del derecho a la libertad física, o la
protección de la vida misma, motivo por el cual se constituye en una acción tutelar preventiva,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 540


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza como su nombre lo indica, la


libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE”.

En ese sentido la nueva Constitución Política del Estado “…es más amplia en cuanto a su ámbito
de protección, pues se extiende al derecho a la vida, la libertad física o personal, el debido
proceso, en lo que se refiere al procesamiento indebido y la libertad de locomoción, ésta última
dada la íntima relación que existe con el derecho a la libertad física, según la interpretación
extensiva realizada por la SC 0023/2010-R de 13 de abril” (SC 1211/2011-R de 13 de
septiembre).

Ahora bien, con relación a los alcances de protección que brinda la actual acción de libertad la SC
0199/2010-R de 24 de mayo, señaló que: “No obstante, la naturaleza de esta acción tutelar, al
constituirse en un mecanismo de protección contra las lesiones al derecho a la libertad, y medio
eficaz e inmediato reparador de ese derecho; empero la existencia de esta garantía
constitucional, no implica que todas las lesiones al derecho a la libertad tengan que ser
necesariamente reparadas de manera exclusiva y excluyente a través del hábeas corpus,
actualmente acción de libertad; pues no se trata de una garantía que tenga la vocación de
reparar, en exclusiva, todas las formas de lesión a la libertad que pudieran invocarse, sino la de
dotar a la persona de un medio de defensa sencillo, eficaz y oportuno, para restablecer la lesión
sufrida” (negrillas añadidas).

La acción de libertad, es una garantía constitucional, que se constituye en un instrumento de


defensa o de protección, contra las lesiones al derecho a la libertad; además, de ejecutarse a través
de un procedimiento constitucional sumarísimo; por lo que, el constituyente otorgó a cualquier
persona este medio de defensa directo, sencillo, eficaz y oportuno, para restituir los derechos a la
libertad física o personal y de locomoción que hubieren sido vulnerados.

III.2. La acción de libertad traslativa o de pronto despacho

El Tribunal Constitucional en la SC 1579/2004-R de 1 de octubre, concluyó que el recurso de


hábeas corpus -actualmente acción de libertad- “…por violaciones a la libertad individual y/o
locomoción, puede ser reparador si ataca una lesión ya consumada, preventivo si procura impedir
una lesión a producirse o correctivo si intenta evitar que se agraven las condiciones en que se
mantiene a una persona detenida”.

En ese entendido, el Tribunal Constitucional siguiendo el razonamiento acogido por la SC


0044/2010-R de 20 de abril, consideró tres tipos de hábeas corpus -ahora acción de libertad-
agregando otros, reconocidos por la doctrina y el derecho comparado tales como el hábeas corpus
restringido, que procede cuando el derecho a la libertad física es objeto de molestias, obstáculos,
perturbaciones que sin ningún fundamento legal, configuran una restricción para su cabal ejercicio;
el traslativo o de pronto despacho, a través del cual se busca es acelerar los trámites judiciales o
administrativos cuando existen dilaciones indebidas, para resolver la situación jurídica de la
persona que se encuentra privada de libertad, y el hábeas corpus instructivo que hace referencia a
supuestos, en que el derecho a la libertad se encuentra vinculado al derecho a la vida,
fundamentalmente en los casos de desaparición forzada de personas, y tiene como objeto
identificar el paradero de la víctima, disponer su libertad e individualizar a los autores del hecho,
garantizándose el derecho a la vida y también el derecho a la integridad física; asimismo, la SC
0465/2010-R de 5 de julio, en su Fundamento Jurídico III.3 concluyó que: “…los tipos de hábeas
corpus precedentemente aludidos, también pueden ser identificados en la nueva Ley Fundamental,
e inclusive ampliados. Así dentro de la tipología desarrollada por la jurisprudencia del Tribunal
Constitucional citada líneas precedentes, se agregó el hábeas corpus restringido, el hábeas corpus
instructivo y al hábeas corpus traslativo o de pronto despacho.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 541
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Conforme la doctrina constitucional sentada por este Tribunal, por medio del hábeas corpus
traslativo o de pronto despacho, se busca acelerar los trámites judiciales o administrativos
cuando existen dilaciones indebidas, para resolver la situación jurídica de la persona que se
encuentra privada de libertad” (las negrillas son agregadas).

Siguiendo la jurisprudencia desarrollada por la citada SC 0465/2010-R, en su Fundamento Jurídico


III.4 señaló: “Para la concreción del valor libertad, el principio celeridad y el respeto a los
derechos, se ha previsto una acción de defensa específica que coadyuve para que los mismos no se
vean afectados por actos lesivos y en caso de que así fuera, se puedan restituir a su estado natural,
en especial tratándose de derechos fundamentales…”.

En este mismo Fundamento Jurídico agregó a la tipología, el hábeas corpus -ahora acción de
libertad- traslativo o de pronto despacho: “…el cual se constituye en el mecanismo procesal idóneo
para operar en caso de existir vulneración a la celeridad cuando esté relacionada a la libertad y
devenga de dilaciones indebidas, que retardan o evitan resolver la situación jurídica de la persona
que se encuentra privada de libertad”.

III.3. La celeridad en las actuaciones procesales y la dilación indebida en la tramitación de la


solicitud de cesación de detención preventiva

El constituyente ha previsto principios procesales específicos en los cuales se fundamenta la


jurisdicción ordinaria, así se tiene el art. 178.I de la CPE, que dispone que la potestad de impartir
justicia emana del pueblo boliviano y se sustenta entre otros, el principio de celeridad, norma
constitucional concordante con el art. 180.I de la citada norma, que determina que dicha
jurisdicción se fundamenta también en los principios procesales de eficacia, eficiencia y celeridad,
entre otros.

La jurisprudencia constitucional, contenida en la SC 1072/2005-R de 5 de septiembre, ha


establecido que:”…los fiscales, autoridades judiciales o administrativas, debe atender las
solicitudes y trámites en los que esté de por medio el derecho a la libertad, con la inmediatez
necesaria, dentro de un plazo razonable, con la finalidad de que la situación jurídica de las
personas, dado el derecho primario que se encuentra amenazado o restringido, pueda ser definida
sin dilaciones indebidas” (las negrillas son añadidas).

Asimismo, siguiendo el entendimiento de la SC 0465/2010-R, que refiere: ”Para la concreción del


valor libertad, el principio celeridad y el respeto a los derechos, se ha previsto una acción de
defensa específica que coadyuve para que los mismos no se vean afectados por actos lesivos y en
caso de que así fuera, se puedan restituir a su estado natural, en especial tratándose de derechos
fundamentales…” (las negrillas nos corresponden).

Entonces tal y como se desarrolló en el Fundamento Jurídico III.1 de la presente Sentencia, la SC


0337/2010-R de 15 de junio, señaló respecto al hábeas corpus traslativo o de pronto despacho que:
“…se constituye en el mecanismo procesal idóneo para operar en caso de existir vulneración a
la celeridad cuando esté relacionada a la libertad y devenga de dilaciones indebidas, que
retardan o evitan resolver la situación jurídica de la persona que se encuentra privada de
libertad” (las negrillas son nuestras).

De igual manera la jurisprudencia constitucional, en la SC 0465/2010-R al respecto, indicó que:


“… todas aquellas solicitudes vinculadas a la libertad del imputado, en especial la cesación de la
detención preventiva, deben ser tramitadas con la debida celeridad, puesto que el ingresar en una
demora o dilación indebida en que incurra una autoridad judicial al resolver una solicitud de tal
naturaleza, implica una lesión a ese derecho fundamental, supuesto ante el cual se activa el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 542
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

hábeas corpus traslativo o de pronto despacho; empero se deja claramente establecido, que no
existirá lesión si la demora o dilación es promovida por el propio imputado” (las negrillas nos
corresponden).

Por la jurisprudencia citada anteriormente se puede colegir que, toda solicitud o trámite en el que
se encuentre involucrado el derecho a la libertad física o personal, debe tramitarse con la mayor
celeridad posible o dentro de un plazo razonable y sin causar dilaciones indebidas, más aún
tratándose de las solicitudes de cesación de la detención preventiva, puesto que se encuentra de por
medio el derecho a la libertad, deben tener un trámite rápido y oportuno, de lo contrario se estaría
incurriendo en situaciones que en vez de apresurar, más bien dilaten indebidamente el proceso,
pues necesariamente para ello se debe considerar de forma paralela la celeridad y el plazo
razonable.

III.4. Sobre la remisión de la prueba al Tribunal Constitucional Plurinacional por jueces y


tribunales de acción de libertad

La Constitución Política del Estado, en lo concerniente a la acción de libertad, en su art. 125,


acentuando el carácter informal de esta acción, indica que: “Toda persona que considere que su
vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de
libertad personal, podrá interponer la acción de libertad y acudir, de manera oral o escrita, por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal…” (las negrillas son nuestras).

Por otro lado, el art. 126.IV de la referida norma, establece: “el fallo judicial se elevará en
revisión, de oficio, ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, en el plazo de las veinticuatro
horas siguientes de la emisión de dicho fallo”, concordante con el art. 64 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional (LTCP), que establece: “En las acciones de Libertad… las
resoluciones serán elevadas en revisión de oficio, ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, en
el plazo de las veinticuatro horas siguientes a la emisión del fallo sin que por ello se suspenda su
ejecución” (las negrillas nos corresponden).

Por su parte, el art. 68.2 de la LTCP, refiriéndose al trámite de la acción de libertad señala que la
jueza, juez o tribunal de garantías después de admitir la demanda “…dispondrá la citación personal
o por cédula a la autoridad o persona denunciada… con el objeto de que presente informe sobre los
hechos denunciados, si corresponde la prueba que tuviera en su poder u ordenará a quien
tenga en su poder la remisión de actuados concernientes al hecho denunciado”. De ahí que,
conforme reza el art. 69.I de la LTC “La resolución se pronunciará de manera fundamentada en la
misma audiencia pública inmediatamente recibida la información de la autoridad o persona
demandada y, a falta de ésta, se lo hará sobre la base de la prueba que ofrezca la persona
accionante” (las negrillas nos pertenecen).

Del contenido de las normas constitucionales y legales citadas, respecto al manejo de la prueba en
un proceso constitucional, como es la acción de libertad, se tiene que en base al principio de
informalismo y el principio de verdad material que rige también en la justicia constitucional,
traducido en la prevalencia del derecho sustancial sobre el derecho procesal, debe diferenciarse
“…entre la labor revisora del Tribunal Constitucional y la labor de los jueces y tribunales de
garantías, cuya decisión debe regirse por el principio de inmediación -contacto directo entre el
juez, las pruebas y las partes-…(que exige)… al juez o tribunal de garantías…” (Arias López,
Boris Wilson. El informalismo en la acción de libertad); es decir, que por el principio de
inmediación y la posibilidad de los jueces y tribunales de garantía de acudir a los centros de
detención, el deber de diligencia que deben tener en la recolección de elementos probatorios resulta
mucho más intenso que la del Tribunal Constitucional Plurinacional, que por el transcurso del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 543
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tiempo únicamente puede requerir prueba indispensable para la resolución de un caso en el marco
de la facultad conferida por el art. 41 de la LTCP, pese a ello, corresponde aclarar que el deber de
diligencia de los jueces y tribunales de acciones de libertad debe desarrollarse en el marco de su
naturaleza, es decir, que al no constituirse la esta acción en un proceso de conocimiento carece de
etapa probatoria y debe regirse necesariamente por la celeridad.

Asimismo, la diligencia del juez o tribunal de garantías tampoco excluye la posibilidad de que la
parte accionante aporte elementos de convicción que le permitan obtener una resolución favorable
a sus pretensiones máxime, cuando en ciertas circunstancias es la única que conoce y puede
presentar dicha prueba.

Finalmente, la parte demandada se encuentra impelida por su propio interés en presentar prueba
para la desestimación de la acción de libertad cuya negligencia puede incluso dar lugar a
responsabilidad constitucional, más aún cuando la acción este dirigida contra un servidor público
en cuyo caso ya no se trata de una carga procesal sino un deber procesal emergente del art. 235.2
de la CPE que establece que las y los servidores públicos deben “cumplir con sus
responsabilidades, de acuerdo con los principios de la función pública” y el art. 113.II que refiere:
“En caso de que el Estado sea condenado a la reparación patrimonial de daños y perjuicios, deberá
interponer la acción de repetición contra la autoridad o servidor público responsable de la
acción u omisión que provocó el daño”. Es decir, en estos últimos casos en el ámbito de sus
competencias y bajo responsabilidad todo servidor público no sólo cuenta con la obligación de
presentarse a la audiencia, sino presentar conjuntamente a su informe la prueba pertinente a la
acción de libertad, de forma que no provoque que el juez o tribunal de garantías e incluso este
propio Tribunal emitan fallos sobre prueba incierta o basados únicamente en presunciones.

De lo anteriormente explicado se establece que todo juez o tribunal de garantías, cuenta con la
obligación de remitir al Tribunal Constitucional Plurinacional:

a. Toda la prueba aportada por la parte accionante y demandada en la acción de libertad.

b. La prueba que de oficio pudo producir máxime cuando la misma haya servido para resolver
inicialmente la problemática.

En este sentido, la inobservancia en la remisión de los elementos de convicción por parte de jueces
y tribunales de garantías, provocaría a este Tribunal la necesidad de su solicitud, que no sólo
implicaría un costo adicional a la administración de justicia constitucional sino también, provocaría
una dilación en la misma.

Debe aclararse que el entendimiento asumido en la remisión de elementos de convicción a este


Tribunal, no menoscaba la facultad conferida por el art. 41 de la LTCP e incluso
independientemente a la responsabilidad funcionaria que pueda evidenciarse, ante la inobservancia
de lo anteriormente referido por parte de los jueces y tribunales de acción de libertad, bajo el
principio de informalismo, el Tribunal Constitucional Plurinacional puede resolver la causa sin
requerir la remisión de prueba omitida cuando de las circunstancias del caso pueda conformarse
convicción, conforme a la naturaleza sumaria de esta acción de defensa.

En el caso concreto de la revisión de antecedentes que cursan en obrados, se tiene que la


Resolución del Juez de garantías, refiere como fundamentos: “…del cuaderno procesal se
evidencia que existen varios imputados, así Aníbal Martínez solicita la cesación el 5 de enero de
2012, y mediante resolución cursante a fs. 362, se le señala audiencia para 15 días después, el día
viernes 20 de enero de 2012; por otra parte el coimputado Roberto Rojas Ríos, también pide
audiencia de cesación a la detención preventiva, en fecha 12 de enero de 2012 y extrañamente se le
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 544
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fija audiencia para el día jueves 19 de enero del mismo año, siete días después, en consecuencia se
constata y evidencia que el juez, no otorga los mismos plazos a personas que están siendo juzgados
dentro del mismo proceso, vulnerándose así también lo que establece el art. 12 de la Ley 1970, cual
es el principio de igualdad“; situación de la cual puede deducirse que el Juez de garantías, tuvo
acceso a las pruebas, porque fundamentó su Resolución en ellas pero no las remitió, obligando a
esta Sala del Tribunal Constitucional Plurinacional a requerir mayor información; motivo por el
cual a través del AC 007/2012-CA/S de 27 de febrero, se tuvo que suspender el cómputo del plazo
por solicitud de documentación, provocando dilación involuntaria de diez días, puesto que el plazo
fue reanudado el 13 de marzo de 2012; razón por la cual, corresponde llamar la atención al Juez de
garantías que conoció la presente acción.

III.5. Análisis del caso concreto

III.5.1. De la revisión del memorial de interposición de la presente acción y su respectiva


ampliación en audiencia por parte del abogado del accionante, -Aníbal Martínez Núñez-, refiere:
que ante las peticiones de cesación presentadas, el accionante en su oportunidad preguntó en el
Juzgado sobre la providencia y no obstante a la negativa de su existencia, apareció señalada la
audiencia para consideración de cesación a la detención preventiva fijada para el 20 de enero de
2012; fecha que considera fue establecida, dejando a un lado el principio de celeridad que
caracteriza este tipo de solicitudes.

III.5.2. En el presente caso dentro del proceso penal que le sigue el Ministerio Público en su
contra, solicitó ante el Juez demandado el 5 de enero de 2012 audiencia de cesación a su detención
preventiva habiéndose fijado por decreto de 6 de enero audiencia para el 20 de enero del mismo
año, decreto con el que la parte accionante alega no haber sido notificado, aspecto que no fue
desmentido por la parte demandada interponiéndose la presente acción el 13 de enero de 2012.

Por otra parte, cuando se pide en reiteradas oportunidades la cesación de una medida cautelar de
carácter personal y no se resuelve dentro de un plazo razonable, nos encontramos frente a un
proceso en dilación; por lo que, se puede advertir que en el presente caso el accionante refiere en su
memorial de interposición de la acción, que primeramente “…solicitó audiencia de cesación a la
detención preventiva dentro del sumario investigativo…” (fs. 3 y 4) -situación que no es
desvirtuada por el demandado-, para luego por segunda vez verse obligado a reiterar su petición a
través del memorial de 5 de enero de 2012 (fs. 2).

III.5.3. De las afirmaciones de ambas partes, se puede advertir que a través de la providencia de 6
de enero de 2012, se fija audiencia de cesación a la detención preventiva, para el día 20 de enero
del mismo año; es decir, luego de quince días, plazo que evidentemente no es razonable siendo que
toda solicitud en la que esté vinculada la libertad debe caracterizarse por el principio de celeridad
máxime como destaca el juez de garantías en su Resolución, respecto al otro procesado: “por otra
parte el coimputado Roberto Rojas Ríos, también solicita audiencia de cesación a la detención
preventiva, en fecha 12 de enero de 2012 y extrañamente se le da audiencia para el jueves 19 de
enero del mismo año; siete días después”; es decir, que la autoridad demandada no otorgó los
mismos plazos a los coimputados que están siendo procesados dentro del mismo proceso.

Con referencia a la prontitud y celeridad que debe existir en la tramitación de cesación de


detención preventiva, en virtud a los Fundamentos Jurídicos III.2 y 3 de la presente Sentencia, se
puede colegir que la autoridad demandada tampoco procedió en su decreto a explicar al accionante,
el o los motivos de dilación en el señalamiento de la audiencia; provocando que el trato brindado al
accionante sea fundamentalmente autoritario ignorándose los valores rectores que rigen a la
administración de justicia.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 545


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Lo anterior, concuerda además con la SC 0078/2010-R, de 3 de mayo, que consideró como acto
dilatorio: “b) Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o prudencial.
Plazo que puede ser en un límite de tres o cinco días máximo, dependiendo de la particularidad
de cada caso, cuando por ejemplo existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan
que ser notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado acto previo y
esencial -como sucede con algunas notificaciones-, o que el juzgado esté de turno, etc. Con la
excepción única y exclusiva en los casos que exista complejidad por la naturaleza propia y la
relevancia del proceso, como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a la petición;
situación que deberá ser justificada por la autoridad judicial competente a momento de señalar la
fecha de audiencia, teniendo en cuenta la razonabilidad”.

III.6. Falta de asimilación de la jurisprudencia constitucional por parte de algunos jueces


ordinarios

Desde el inicio de labores del Tribunal Constitucional se sostuvo la necesidad de tratar de forma
preferente y con la debida celeridad las peticiones en las cuales se encuentre de por medio la
libertad, así por ejemplo en la SC 1036/01-R se reprochó la demora en la celebración de una
audiencia de cesación a la detención preventiva que: “…debió ser resuelta de manera inmediata,
más aún cuando se trata de una solicitud que está vinculada al restablecimiento de un derecho
fundamental…” como es la libertad personal entendimiento reiterado entre otras por las SSCC
0982/2004-R, 1109/2004-R, entre otras que evidencian una línea jurisprudencial uniforme y de
larga tradición en el órgano de control de constitucionalidad.

En este contexto, este Tribunal observa con preocupación, cómo después de haberse sentado una
línea jurisprudencial clara respecto al tratamiento con la debida celeridad ante solicitudes que
comprometen la libertad después de más de 10 años, todavía siguen reiterándose regularmente este
tipo de acciones en trámites de solicitudes del restablecimiento del derecho a la libertad situación
que evidencia la existencia de jueces que todavía resisten con diversas excusas la jurisprudencia
constitucional, sin considerar el carácter vinculante y de cumplimiento obligatorio que tienen las
sentencias constitucionales.

La obligada reiteración de jurisprudencia en este tipo de casos, no sólo implica un desgaste de


recursos humanos, económicos, intra-procesales, sino que su propio procesamiento implica a veces
el entorpecimiento de la tramitación de otros procesos y el correspondiente perjuicio a otros
litigantes que deben esperar la tramitación de una acción de libertad que cuenta con tramitación
preferente, y peor aún que resulta obvia en su resolución de forma que en este caso únicamente, se
llamará la atención al juez demandado pero con la advertencia de que la reiteración provocará
necesariamente a que el Tribunal Constitucional Plurinacional remita antecedentes al Consejo de la
Magistratura o al Ministerio Público aspecto que sucederá además en todo caso con supuestos
fácticos análogos.

En consecuencia, el Juez de garantías al haber concedido la acción de libertad, actuó


correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve:

1º APROBAR la Resolución 01 de 13 de enero de 2012 cursante a fs. 13 a 16, dictada por el Juez
Primero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz; y en consecuencia
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 546
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conceder la tutela solicitada, ratificar las costas a cargo del juez demandado, conforme al
Fundamento Jurídico III.6 de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional.

2º Llamar la atención al Juez de garantías, por la omisión de remisión de pruebas ante éste
Tribunal.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0088/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00121-01-2012-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 01 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 9 a 10, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Nicollette Paola Viscarra Irusta y Carlos Lidio
Aparicio Seleme contra Enrique Morales Díaz, Juez Primero de Instrucción en lo Penal de
El Alto del Distrito Judicial de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Por memorial presentado el 7 de febrero de 2012, cursante de fs. 2 a 3, los accionantes expresan
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que la motivan

Los accionantes sostienen que se encuentran detenidos en celdas de la Policía Judicial del
Tribunal de Justicia de El Alto, desde el 2 de febrero de 2012, a raíz de una Resolución de
imputación emitida por el Fiscal asignado al caso, quien no les proporcionó el cuaderno de
investigaciones para que puedan asumir su defensa, siendo remitidos con dicha imputación ante
el Juez Noveno de Instrucción en lo Penal, donde se suscitaron irregularidades, tales como no
haber sido notificados con la imputación formal ni el señalamiento de día y hora de audiencia
quedando en estado de indefensión absoluta.

Continúan señalando que recién fueron notificados con la imputación el 3 del señalado mes y
año, a horas 19:00, minutos antes de que el Juez instale la audiencia, razón por la cual
plantearon recusación contra la mencionada autoridad, remitiéndose los antecedentes al Juzgado
Cuarto de Instrucción en lo Penal el 4 del mismo mes y año; sin embargo, debido a otra
recusación planteada contra la Jueza Margot Pérez, para la consideración de aplicación de
medidas cautelares, los antecedentes y sus personas fueron remitidos al Juzgado de turno de El
Alto, el 5 de ese mes y año a horas 10:20., donde prosiguieron las irregularidades, ya que la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 547
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Secretaria del Juzgado, tenía la intención de recepcionar los mismos a horas 09:00, siendo esta
aseveración una falsedad por parte de la funcionaria, ante el reclamo de ambos accionantes, el
Auxiliar del mismo Juzgado, puso una nota de aclaración debajo del sello de recepción
indicando que sus personas juntamente a los antecedentes fueron presentados a horas 10:20.
Finalmente relatan que, el 5 de febrero de 2012, a horas 13:25, presentaron un memorial,
recusando al Juez de turno de El Alto, donde dicha autoridad tenía veinticuatro horas para
resolver la recusación y remitirlos al juez llamado por ley, situación que recién se produjo
después de horas 16:45, encontrándose ilegalmente detenidos por más de veintisiete horas.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes denuncian la vulneración de sus derechos a la libertad y al debido proceso, sin
citar los artículos de la norma que los contiene.

I.1.3. Petitorio

Solicitan se repare la violación al derecho y “garantía” constitucional aludidos, disponiendo su


libertad inmediata.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 8 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 8 y
vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El Secretario del Juzgado de garantías, informó en audiencia sobre la ausencia de los


accionantes y su abogada, por lo que se dio lectura íntegra del memorial de acción de libertad.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Enrique Morales Díaz, Juez Primero de Instrucción en lo Penal de El Alto, en audiencia informó
lo siguiente: a) El proceso fue remitido a su Juzgado, que se encontraba de turno el sábado en
horas de la tarde, simplemente con el cuaderno procesal y sin los detenidos, los cuales recién
llegaron al día siguiente a horas 10:30, por lo que instalada la audiencia a las 11:30; y, b) Fue
recusado por las partes en audiencia de consideración de medidas cautelares, por lo que fue
diferida, habiéndose resuelto la misma con el rechazo, allanándose y remitiéndola al Juzgado
Quinto de Instrucción el día lunes 6 ese mismo mes y año.

I.2.3. Resolución

La Jueza Cuarta de Partido, Liquidador y de Sentencia de El Alto, Patricia Chávez García,


constituida en Jueza de garantías, pronunció la Resolución 01 de 8 de febrero de 2012, cursante
de fs. 9 a 10, denegando la tutela solicitada por los accionantes con los siguientes fundamentos:
1) Los accionantes manifiestan estar indebidamente detenidos, debido a que el Juez cautelar de
turno de El Alto, no habría resuelto una recusación formulada en su contra dentro de las
veinticuatro horas; 2) El demandado en audiencia informó que dispuso la remisión de
antecedentes al Juzgado siguiente en número, para que el proceso continúe con control
jurisdiccional al tratarse de un caso con detenidos; 3) No se adjuntó elementos de convicción por
la parte accionante, ni se remitió el cuaderno procesal, constatándose únicamente que el
demandado ha sido recusado y este ha dispuesto la remisión de antecedentes al juez siguiente; y,
4) Se debe tener en cuenta que las autoridades cautelares se constituyen en jueces de garantías
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 548
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conforme a los arts. 54 y 279 del Código de Procedimiento Penal (CPP), por lo que no se ha
demostrado que la parte accionante hubiese planteado las observaciones señaladas, para poder
activar la jurisdicción constitucional.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Cursa la Resolución 031/2012 de 5 de febrero, mediante la cual el Juez Primero de


Instrucción en lo Penal de El Alto, rechaza la recusación planteada por los accionantes ,
disponiendo la remisión de antecedentes en aplicación del art. 321 del CPP, al juez siguiente en
número, para que el proceso continúe bajo el control jurisdiccional, con los siguientes
fundamentos: i) El presente proceso penal fue remitido por la Jueza Cuarta de Instrucción en lo
Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz a consecuencia de otra recusación, por
lo cual declina a la ciudad de El Alto, para resolver la situación procesal de los imputados; y, ii)
El fundamento señalado en el recurso de recusación no es cierto y evidente, ya que su autoridad
no ha demostrado en ningún momento tener interés en favorecer a alguna de las partes que ni
siquiera conoce, por lo que no se ha acreditado los fundamentos de la recusación de manera
fehaciente (fs. 6 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes denuncian que se encuentran detenidos en las celdas de la Policía Judicial del
Tribunal de Justicia de El Alto, a raíz de una imputación formal realizada ante el Juzgado
Noveno de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz por el
Fiscal asignado al caso, sin que éste les hubiera proporcionado el cuaderno de investigaciones
para asumir su defensa, provocándoles estado de indefensión, recién en dicho Juzgado minutos
antes de realizarse la audiencia fueron notificados con la imputación referida, por lo que
recusaron a la autoridad del referido despacho judicial, siendo remitidos al Juzgado Cuarto de
Instrucción en lo Penal de la misma ciudad; sin embargo, debido a otra recusación planteada
contra la referida Jueza, fueron derivados al Juzgado Primero de Instrucción en lo Penal de El
Alto, que se encontraba de turno, en dicho Juzgado según los accionantes prosiguieron la
irregularidades, como el hecho de que la Secretaria tenía la intención de recepcionar los
antecedentes con una hora distinta a la real, ante esa situación presentaron un memorial
recusando al Juez de ese Despacho, mismo que después de resolver la recusación los remitió al
Juzgado siguiente en número, por lo que se encuentran ilegalmente detenidos.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


libertad, precisando: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad” (art. 125).

Asimismo la SC 2209/2010-R, de 14 de noviembre, expresa que: “Este mecanismo


extraordinario de protección, se halla consagrado en el art. 125 de la CPE, como una acción
jurisdiccional de rango constitucional que está destinada a la defensa y protección del derecho
a la vida y a la libertad personal, manteniendo su fin esencial tal cual es, ser una acción tutelar
preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza sobre todo el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 549
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derecho a la libertad personal y ampliando su núcleo esencial y otorgando un paraguas más


amplio, protegiendo el derecho a la vida, siempre y cuando ésta esté relacionada con el derecho
a la libertad; asimismo, restablece lesiones a la garantía del debido proceso cuando existe un
nexo directo con este derecho, es decir, que el acto ilegal que se demanda, esté interconectado
con la amenaza o restricción o supresión de este derecho”.

Complementando los alcances de esta acción tutelar, el Tribunal Constitucional a través de la SC


0023/2010-R de 13 de abril, señaló que: “…la nueva Constitución Política del Estado, es más
amplia en cuanto a su ámbito de protección, pues éste se extiende al derecho a la vida, y en
cuanto al derecho a la libertad, en ambos casos, de manera expresa en la Constitución Política
del Estado vigente, la protección está destinada al derecho a la libertad física o personal…”.

III.2. Trámite procesal y resolución de la recusación en materia penal

Conforme a lo previsto por el art. 320 del CPP, “La recusación se presentará ante el juez o
tribunal que conozca el proceso, mediante escrito fundamentado, ofreciendo prueba y
acompañando la documentación correspondiente. Si el juez recusado admite la recusación
promovida, se seguirá el trámite establecido para la excusa. En caso de rechazo se aplicará el
siguiente procedimiento: 1) Cuando se trate de un juez unipersonal, elevará antecedentes al
tribunal superior dentro de las veinticuatro horas de promovida la recusación, acompañando el
escrito de interposición junto con su decisión fundamentada de rechazo. El tribunal superior,
previa audiencia en la que se recibirá la prueba e informe de las partes, se pronunciará dentro de
las cuarenta y ocho horas siguientes sobre la aceptación o rechazo de la recusación, sin recurso
ulterior. Si acepta la recusación, reemplazará al juez recusado conforme a lo previsto en las
disposiciones orgánicas; si la rechaza ordenará al juez que continúe con la sustanciación del
proceso, el que ya no podrá ser recusado por las mismas causales…”. El art. 321 del mismo
Código, agrega que una vez producida la excusa o promovida la recusación, el juez no podrá
realizar en el proceso ningún acto bajo sanción de nulidad.

La SC 0396/2006-R de 25 de abril, reiterada por la SC 0681/2010-R de 19 de julio, entre otras


estableció que: “Conforme al mandato del art. 279 del CPP, tanto la actuación de la Fiscalía
como de la Policía deben realizarse necesariamente bajo control jurisdiccional. En tal virtud,
de darse el caso de que el Juez de Instrucción en lo Penal a cargo del control jurisdiccional de
una investigación fuera recusado, y en consecuencia suspendida su competencia, materialmente
no podría ejercer control jurisdiccional y por ende la Fiscalía ni la Policía podrían realizar
ningún acto de investigación. Sin embargo, como tampoco es posible admitir esta posibilidad,
no sólo por la retardación de justicia que podría generar sino también por las graves
implicancias que ello podría acarrear, se debe aplicar la suplencia legal, que si bien no está
prevista expresamente dentro de las disposiciones que regulan la recusación en materia penal,
empero, realizando una interpretación sistemática del Código de Procedimiento Penal,
especialmente del capítulo IV del libro I referido a la excusas y recusaciones, esta posibilidad
está reconocida en el caso de las excusas y es extensiva a la recusación de modo tal que en
ningún momento una investigación quede sin control jurisdiccional, por lo que en estos casos el
Juez de Instrucción contra quien se hubiera promovido la recusación debe remitir el
conocimiento del caso al suplente legal, razonamiento que es concordante con la previsión del
art. 183 de la Ley de Organización Judicial, vigente”.

III.3. El Juez cautelar como contralor de la investigación

De acuerdo a lo determinado por los arts. 54 inc. 1) y 279 del CPP, los jueces de instrucción
ejercen el control jurisdiccional durante el desarrollo de la investigación respecto a la Fiscalía y
a la Policía Nacional, normativa legal que en sus arts. 289 y 298 in fine, constriñe al fiscal a dar
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 550
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

aviso al juez cautelar sobre el inicio de la investigación dentro de las veinticuatro horas de
iniciada la misma, en el entendido de que es esta última la encargada de velar que la fase de la
investigación se desarrolle dentro del marco establecido por la Constitución Política del Estado,
las Convenciones y Tratados Internacionales vigentes y las normas del Código de Procedimiento
Penal que forman parte del llamado bloque de constitucionalidad; en tal sentido, toda persona
involucrada en una investigación que considere la existencia de una acción u omisión que
vulnera sus derechos y garantías, entre las cuales se encuentra el derecho a la libertad debe
acudir ante esa autoridad, así lo ha señalado el Tribunal, Constitucional cuando en la SC
0097/2010-R de 10 de mayo dispuso: “… En el caso de la etapa preparatoria, los arts. 54 inc.
1) y 279 del Código de Procedimiento Penal (CPP), atribuyen al Juez de Instrucción en lo
Penal, la función de ejercer control jurisdiccional respecto a las actuaciones de la Fiscalía y la
Policía Nacional, es por eso que la misma norma legal en sus arts. 289 y en la parte in fine del
art. 298 obliga al Fiscal a dar aviso de la investigación dentro de las veinticuatro horas de
iniciada la misma, pues es el Juez el encargado de precautelar que la fase de la investigación se
desarrolle en correspondencia con el sistema de garantías reconocido por la Constitución
Política del Estado, las Convenciones y Tratados Internacionales vigentes y las normas del
Código de Procedimiento Penal pudiendo asumir las medidas que el caso aconseje; de manera
que el Juez cautelar tiene plena facultad para disponer por ejemplo la libertad del imputado e
incluso la nulidad de obrados cuando existen defectos absolutos (art. 169 del CPP); en
coherencia con esa disposición el art. 5 del mismo cuerpo legal dispone que: 'El imputado
desde el primer momento de su detención podrá ejercer todos los derechos y garantías que la
Constitución, las Convenciones y los Tratados Internacionales vigentes le reconozcan, desde el
primer acto del proceso hasta su finalización'.

De lo anterior se extrae que todo imputado que considere que en el curso del proceso
investigativo ha sufrido una lesión de un derecho fundamental, entre ellos, el derecho a la
libertad en cualquiera de las formas en que pueda sufrir menoscabo, debe impugnar tal
conducta ante el juez instructor, que es el órgano jurisdiccional que tiene a su cargo el control
de la investigación, desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa preparatoria. Así,
el Código de Procedimiento Penal al prever la existencia de un órgano jurisdiccional
competente para conocer y resolver de manera directa y expedita, las supuestas vulneraciones a
los derechos y garantías que pudieran tener origen en los órganos encargados de la
persecución penal; no resulta compatible con el sistema de garantías previsto en el
ordenamiento aludido, acudir directamente o de manera simultánea a la justicia constitucional,
intentando activar la garantía establecida por el art. 18 de la CPE, ignorando los canales
normales establecidos.

Consiguientemente, el recurso de hábeas corpus sólo se activa en los casos en que la supuesta
lesión no sea reparada por los órganos competentes de la jurisdicción ordinaria aludidos".

Conforme a lo glosado precedentemente, se establece con claridad absoluta que el llamado a


ejercer el control jurisdiccional de la investigación, así como velar por el cumplimiento y respeto
de los derechos y garantías constitucionales es el juez cautelar, quién con jurisdicción y
competencia privativa propias reconocidas por los arts. 54 inc.1) y 279 del CPP, podrá ejercer el
control efectivo de los actos investigativos tanto del fiscal como de los funcionarios policiales
desde el primer acto del proceso hasta la conclusión de la etapa preparatoria cual prevé la norma
del art. 323 del referido Código.

III.4. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

De modo excepcional, se inviabiliza la tutela otorgada por la acción de libertad a favor de la


parte accionante que previamente no hubiese activado los medios legales específicos, idóneos,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 551
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

oportunos y eficientes de defensa, para la restitución de su derecho a la libertad indebidamente


restringido; dado que en la generalidad, cuando se alega la comisión de actos lesivos a la libertad
dentro de un proceso, debe acudirse a la autoridad judicial ante quien se tramita y que tiene la
dirección sobre su desarrollo, debiendo velar porque se sustancie sin vicios y estricto
cumplimiento de las disposiciones legales, lo que permite además, la posibilidad de la revisión
de actuados a través de los recursos que franquea la ley.

La afirmación previa, responde a la naturaleza jurídica de la acción de libertad, -prevista en el


art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE)- que amplía su ámbito de protección
inclusive a la vida, amenazada a consecuencia de la privación de libertad, disponiendo: “Toda
persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es
indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de libertad y
acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde
tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se
restituya su derecho a la libertad”.

De este modo, la presente acción es una vía inmediata y eficaz para reparar la lesión al derecho a
la libertad e inclusive el derecho a la vida, cuya vulneración latente estuviera condicionada a la
restricción de la libertad; sin embargo, ante la existencia de otros medios legales idóneos para
asegurar la protección de los referidos derechos, de un modo oportuno, eficaz e inmediato, éstos
necesariamente deben agotarse antes de solicitar la tutela constitucional. Criterio similar se
advierte en el art. 25.I de la Convención Americana de Derechos Humanos, que complementa
sobre este razonamiento afirmando que aquel medio legal ordinario, debe caracterizarse por ser
sencillo y rápido; es decir, resguarde el derecho a la libertad, según las características referidas;
configurándose, de este modo, el carácter subsidiario de la acción de libertad (con el mismo
intelecto, las SSCC 2120/2010-R, 2242/2010-R, 2245/2010-R, 2268/2010-R, 2269/2010-R,
entre otras).

Así, cuando se alega la comisión de actos lesivos a la libertad durante la etapa preparatoria del
proceso penal, corresponde al imputado, en ejercicio de la facultad conferida por los arts. 5, 8 y
9 del CPP y a través de los medios de defensa establecidos por este Código al efecto,
denunciarlos ante el juez de instrucción, quien tiene a su cargo el control de la investigación
(arts. 54 inc. 1) y 279 del CPP).

“De lo anterior se extrae que todo imputado que considere que en el curso del proceso
investigativo ha sufrido una lesión de un derecho fundamental, entre ellos, el derecho a la
libertad en cualquiera de las formas en que pueda sufrir menoscabo, debe impugnar tal
conducta ante el juez instructor, que es el órgano jurisdiccional que tiene a su cargo el control
de la investigación, desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa preparatoria” (SC
0054/2010-R de 27 de abril). Asumido este razonamiento y reiterado en los fundamentos de
recientes Sentencias Constitucionales Plurinacionales, entre ellas la ya citada, se precisó que:
“…ante denuncia de irregularidades, actos ilegales u omisiones presuntamente cometidas por
los fiscales o policías en la etapa preparatoria del proceso, que impliquen lesión a los derechos
fundamentales de todo denunciado o sindicado, la misma debe presentarse ante el juez cautelar
como el encargado de ejercer el control jurisdiccional de la investigación, en aplicación de lo
dispuesto por las normas previstas en los arts. 54.inc 1) y 279 del CPP, sin que sea admisible
acudir en forma directa a esta acción tutelar si con carácter previo los hechos denunciados no
fueron reclamados ante la autoridad encargada del control jurisdiccional, que es la apta para
restablecer las presuntas lesiones a derechos fundamentales y -se reitera- sólo en caso de
verificarse que existirá una dilación o que esa instancia no se constituye en la eficaz y oportuna
para restablecer esos derechos, es que se abre la posibilidad de acudir a la presente acción
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 552
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tutelar en forma directa” (además, las SSCC 0047/2010-R, 0068/2010-R, 0290/2010-R, entre
otras).

III.5. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se tiene que los accionantes se
encuentran detenidos en las celdas judiciales del Tribunal de Justicia de El Alto desde el 2 de
febrero de 2012, a raíz de una imputación formal que el Fiscal asignado al caso formalizó ante el
Juez Noveno de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, sin
haber sido notificados con dicha imputación, la cual recién se produjo el 3 del mismo mes y año,
minutos antes de que se instale la audiencia de medidas cautelares (19:00), razón por la cual
recusan a la autoridad de ese Juzgado, el cual remite los antecedentes y los detenidos el 4 de ese
mes y año al Juzgado de turno, recayendo el proceso en el Juzgado Cuarto de Instrucción en lo
Penal; sin embargo, dicha autoridad también habría sido recusada por los accionantes, por lo que
la Jueza remitió el proceso al Juzgado de turno de El Alto, el día 5 del referido mes y año en
horas de la mañana, donde según los accionantes se siguieron una serie de irregularidades por
parte de la Secretaria del Juzgado, como no colocar la hora verdadera de recepción de los
antecedentes, por este motivo los accionantes también recusaron el mismo día a esta autoridad
jurisdiccional, la cual mediante Resolución 031/2012, rechazó la referida recusa, ya que la
misma carecía de fundamentos por no ser ciertos y evidentes en aplicación del artículo 320 del
Código de Procedimiento Penal (CPP), disponiendo la remisión de antecedentes al juzgado
siguiente en número según lo dispuesto por el art. 321 de la misma norma.

De todo lo anteriormente expuesto, y haciendo un análisis de los Fundamentos Jurídicos III.3 y


III.4, se tiene que los accionantes, al saber de la imputación formal realizada por el Fiscal
asignado al caso, conocían que el Juzgado de Instrucción en lo Penal era el encargado del
control jurisdiccional del proceso, por lo que tenían abierta la posibilidad que la vía ordinaria
otorga en los casos en que existe vulneración de los derechos y garantías en la etapa preparatoria
a través del art. 54.1 del CPP, que expresamente indica: que los jueces de instrucción serán
competentes para: “1) El control de la investigación conforme a las facultades y deberes
previstos en este Código”; es decir, que los accionantes debieron denunciar ante el Juez
cautelar, que era el encargado del control del proceso, sobre las irregularidades que se estaban
suscitando, para que este repare los derechos y garantías que los imputados consideraban
lesionados, activando directamente la vía constitucional para que esta restituya los mismos; sin
embargo, los demandantes han pasado por alto el principio de subsidiariedad excepcional de la
acción de libertad, lo que impide que este Tribunal pueda ingresar a analizar el fondo del asunto.

Es más el art. 5 del CPP, señala que el imputado desde el primer acto del proceso (detención)
podrá ejercer sus derechos. Haciendo uso de los medios de legales específicos e idóneos,
oportunos y eficientes de defensa, para la restitución de su derecho a la libertad inmediata.

Con relación a que los accionantes se encuentren ilegalmente detenidos, se puede apreciar una
serie de constantes recusaciones que los mismos han promovido contra varios Jueces, actuados
que han provocado su situación actual, ya que como se tiene establecido el Fundamento Jurídico
III.2, existe un trámite procesal que establece el art. 320 del CPP, el cual se tiene que cumplir en
el caso de que una autoridad jurisdiccional sea recusada, y tal como indica el art. 321 de la
misma norma, una vez producida la excusa o promovida la recusación, el juez no podrá
realizar en el proceso ningún acto bajo sanción de nulidad, lo que impide se pueda definir su
situación jurídica.

Por los fundamentos anotados precedentemente se confirma que, el presente caso no se


encuentra dentro de las previsiones y alcances de la acción de libertad, por lo que la Jueza de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 553
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

garantías al haber denegado la tutela impetrada, a través de la presente acción de defensa, obró
correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 01 de 8
de febrero de 2012, cursante de fs. 9 a 10, pronunciada por el Juez Primero de Instrucción en lo
Penal de El Alto del Distrito Judicial de La Paz y en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0089/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00142-2012-01-AL
Departamento: Pando

En revisión la Sentencia 06/2012 de 7 de febrero, cursante de fs. 88 vta. a 90 pronunciada dentro de


la acción de libertad interpuesta por William Fernández Fernández contra Francisco Romero y
Víctor Hugo Rivero Toledo, Jueces Técnicos del Tribunal Segundo de Sentencia del Distrito
Judicial de Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante mediante memorial de 6 de febrero de 2012, cursante a fs. 4 y vta., refiere que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En la misma fecha, su abogado le comunicó que mediante Auto de 19 de enero de 2012, se ordenó
su aprehensión, razón por la cual se encuentra ilegalmente perseguido y en peligro de perder su
libertad.

En ese entendido, argumenta que las autoridades demandadas, el mes de octubre de 2011 mediante
resolución, ordenaron se modifiquen las medidas que le fueron impuestas, siendo que éste cumplía
con las mismas a cabalidad; y que dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público en su
contra, es una arbitrariedad que: a) Se le declare rebelde, a pesar de haberse apersonado al proceso
antes de la devolución del edicto; y, b) Se ordene su aprehensión, sin antes haber señalado

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 554


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

audiencia, menos aún si se llevó adelante la misma, modificándose las medidas cautelares
impuestas.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante estima lesionado el derecho a la libertad, citando al efecto el art. 125 de la


Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, dejando sin efecto el Auto de 19 de enero de 2012, debiendo dichas
autoridades emitir una nueva resolución considerando los antecedentes del caso.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 7 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 87 a
88 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, indica que se llevó a cabo una audiencia conclusiva en la localidad de
Puerto Rico del departamento de Pando; posteriormente, se remitieron obrados a la ciudad de
Cobija, donde a través del sorteo respectivo se radicó la causa en el Tribunal Segundo de
Sentencia, que ordenó notificar a su defendido mediante edictos; razón por la que se apersonaron
oportunamente y pidieron la modificación de medidas cautelares, en tal sentido el Tribunal fijó la
fecha de audiencia y en la misma, en presencia de la víctima, se dispuso que el imputado se
presente una vez al mes en el Ministerio Público a firmar, medidas que sostiene, se fueron
cumpliendo.

Sorprendido por la declaratoria de rebeldía, sobre todo porque junto a su defendido se presentaron
a momento de solicitar las medidas cautelares referidas, considera que no pudo declararse la
misma, menos aún haberse emitido la orden de aprehensión, ya que no concurren los requisitos
para su activación (fs. 87 y vta.).

En la segunda intervención en audiencia, indicó que el 8 de agosto de 2011, se radicó la acusación


formal contra su defendido, a raíz de ello se envió la orden instruida, a cuyo efecto el oficial de
diligencias presentó su informe; sin embargo, apersonándose ofrecieron prueba, solicitando la
nulidad de notificación, y se deje sin efecto cualquier medida de orden de aprehensión así como la
modificación de medidas cautelares.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los demandados, Víctor Hugo Rivero Toledo y Francisco Romero, Jueces Técnicos del Tribunal
Segundo de Sentencia, -en audiencia- manifestaron lo siguiente: 1) Una vez radicada la causa en el
Tribunal, se otorgó diez días de plazo para que el acusado -ahora accionante- presente sus pruebas
de descargo, por lo que emitió la orden instruida con el fin de que pueda asumir defensa; sin
embargo, el oficial de diligencias de la localidad de Puerto Rico, el 30 de agosto de 2011, informó
que no se pudo notificar al imputado porque no se conocía su paradero; 2) Ante la petición de
modificación de las medidas cautelares, el Tribunal resolvió la misma el 21 de octubre de 2011; 3)
Posteriormente, observaron el domicilio del imputado, quien no subsanó esta observación, por lo
que pusieron en conocimiento del Ministerio Público y al Fiscal asignado al caso, quienes

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 555


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

solicitaron la notificación mediante edictos y una vez publicados se declaró su rebeldía; y, 4) El


defensor de oficio asignado al caso, debió presentarse y purgar su rebeldía.

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Partido en lo Civil en suplencia legal del Juez de Sentencia del departamento de
Pando, por Resolución 6/2012 de 7 de febrero, concedió la tutela solicitada, ordenando a las
autoridades demandadas dejar sin efecto la Resolución de 19 de enero de 2012 y se dicte una
nueva, tomando en cuenta el apersonamiento de 7 de octubre de 2011, sea en el plazo de cuarenta y
ocho horas; todo lo mencionado se basa en los siguientes fundamentos: i) El art. 87 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), establece los casos en los que el imputado puede ser declarado
rebelde, pero ninguno de ellos hace referencia a la rebeldía en caso de que el imputado no pueda
ser notificado en su domicilio o por haber comparecido dándose por notificado; es así que el inciso
1) del citado artículo, refiere que: “ el imputado será declarado rebelde cuando no comparezca sin
causa justificada a una citación de conformidad a lo previsto en este Código”; es decir, que
respecto a este supuesto la declaratoria de rebeldía se adopta a raíz de la desobediencia al
llamamiento judicial o citación de quien se encuentra sometido a un proceso; por lo que, en el
presente caso se le quería comunicar la radicatoria de la causa, para que en el plazo de diez días
presente su prueba de descargo, a cuyo efecto podía ser notificado en domicilio procesal, conforme
al art. 161 del Código de Procedimiento Civil (CPC), refiere que el imputado, ahora accionante,
aceptó su notificación en la localidad de Puerto Rico -lugar de su residencia- y éste debería ser el
domicilio donde se lo notifique, puesto que no cambió expresamente su domicilio; ii) Si se lo
quería notificar personalmente, el Tribunal no debió aceptar la representación del oficial de
diligencias, sino ordenarle que se le notifique conforme al último párrafo del art. 163 del CPP; iii)
La resolución de rebeldía no menciona la causa por la cual el imputado, ahora accionante, es
declarado rebelde; iv) El accionante ha comparecido, dándose por notificado, por tanto no
correspondía su declaratoria de rebeldía y tampoco debió librarse el mandamiento de aprehensión;
y, v) Considera que el accionante es indebidamente perseguido.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Willian Fernández
Fernández -ahora accionante-, por el delito de robo agravado, mediante Auto de 8 de agosto de
2011, se radicó la causa en el Tribunal Segundo de Sentencia de Pando; a cuyo efecto el oficial de
diligencias de dicho Tribunal, el 15 de agosto del citado año, elevó su representación indicando
que, con la orden instruida emitida por sus autoridades y con el decreto de 23 de agosto de 2011,
no fue notificado el imputado - ahora accionante-, y no siendo habido en el domicilio señalado, los
vecinos le informaron que el mismo no se encuentra en esa localidad (fs. 31 y 32).

II.2. Mediante providencia de 5 de septiembre de 2011, el Tribunal Segundo de Sentencia, en


virtud a la representación de 30 de agosto del mismo año, refirió que el imputado ahora accionante,
no tiene domicilio conocido y se desconoce su paradero; por lo que, ordena su notificación con
la acusación formal a través de edictos de prensa, como lo establece el art. 165 del CPP (fs. 33).

II.3. Por memorial de 12 de octubre de 2011, Willian Fernández Fernández, ahora accionante,
solicitó la nulidad de la notificación por edictos, se le tenga por notificado y se deje sin efecto
cualquier medida u orden de aprehensión. Asimismo, ofrece pruebas y pide la modificación de
medidas cautelares, con el fin de cambiar los días en que debe firmar el libro de asistencia, y el
cambio de domicilio en la ciudad de Cobija; lo que mereció que el Tribunal de garantías,
mediante providencia de 14 de octubre de 2011, determinó que con carácter previo a proveer la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 556
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

solicitud de nulidad de notificación, el impetrante deberá señalar con exactitud su domicilio


procesal y real en la ciudad de Cobija y para considerar la modificación de medida cautelar,
señalaron fecha de audiencia pública para el 18 de octubre del presente año a horas 16:00 p.m. (fs.
48 y vta. y 52).

II.4. Mediante Acta Pública de audiencia de modificación de medidas cautelares, de 21 de octubre


de 2011, en virtud a la certificación de declaratoria en comisión del imputado -ahora accionante-,
presentada por el defensor de la parte, se fijó audiencia para el 26 de octubre del mismo año,
realizada la misma en la fecha referida, se establece que el imputado “se presente a firmar el libro
de presentaciones en la Fiscalía de Distrito de Pando, el primer día lunes de cada mes en horas de
la tarde” (fs. 80 y vta.).

II.5. Mediante memorial presentado el 11 de noviembre de 2011, dirigido al Presidente y Juez


Técnico del Tribunal Segundo de Sentencia de Pando -ahora demandados-, la Fiscal de Materia de
Pando, Blanca Elena Ardaya Vannucci, devolvió publicaciones de edictos y solicitó que se expida
el mandamiento de aprehensión (fs. 85).

II.6. Por Auto de 19 de enero de 2012, el Tribunal Segundo de Sentencia de Pando,


compuesto por los ahora demandados, en constancia de las publicaciones realizadas por radio
FIDES-COBIJA, verificó que han sido difundidos los edictos de 4 y 10 de octubre de 2011, con un
intervalo de cinco días entre cada publicación con la respectiva conminatoria de ley; sin embargo,
refiere que el acusado -ahora accionante-, no se ha presentado ante ese Tribunal, ni tampoco
ha justificado su incomparecencia al proceso para asumir su defensa, por tanto, de
conformidad a lo establecido en los arts. 87 y 89 del CPP declaró: Rebelde a la ley al imputado,
Willian Fernández Fernández -ahora accionante-, disponiendo las siguientes medidas: El
respectivo mandamiento de aprehensión y arraigo, la inscripción en Derechos Reales
(DD.RR.) de sus bienes, para garantizar la eventual responsabilidad civil y la ejecución de la
fianza que hubiera sido prestada (fs. 86).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración del derecho a la libertad, encontrándose ilegalmente perseguido,


debido a que dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público en su contra, por el delito
de robo agravado, se le declaró rebelde a la ley, sin considerar que se apersonó en el proceso antes
de la devolución del edicto y asimismo refirió que se ha cumplido a cabalidad las medidas
cautelares impuestas.

En consecuencia, corresponde determinar en revisión, si se debe conceder o no la tutela solicitada.

III.1. Respecto a las notificaciones en materia penal y su finalidad

En lo referente a las notificaciones en materia penal, de manera general el art. 160 del CPP, señala
que las mismas tienen por objeto hacer conocer a las partes o terceros las resoluciones judiciales,
pues éstas deben ser notificadas obligatoriamente al día siguiente de dictadas, excepto en el caso de
que la ley o el juez disponga un plazo menor; y en el caso de dictarse durante las audiencias orales,
deberán notificarse en el mismo acto por su lectura.

Por otra parte el art. 162 del CPP., describe sobre el lugar de las notificaciones, que: “los fiscales y
defensores estatales serán notificados en sus oficinas y las partes en el domicilio que hayan
constituido en su primera actuación o en su defecto, en estrados judiciales; salvo de
notificaciones personales” (las negrillas son añadidas).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 557


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Al respecto, el art. 163.1 del referido código, indica que se debe notificar personalmente la
primera resolución que se dicte respecto de las partes, en ese sentido de manera general todas
las notificaciones se efectuarán mediante la entrega de una copia de la resolución al interesado y
una advertencia por escrito acerca de los recursos posibles y el plazo para interponerlos, dejando
constancia de la recepción. Asimismo en su último párrafo indica que si el interesado no fuera
encontrado, la notificación personal se la practicará en su domicilio real, dejando copia de la
resolución y de la advertencia en presencia de un testigo idóneo que firmará la diligencia.

Asimismo, el mismo Código de Procedimiento Penal en su art. 166, ha establecido los parámetros
para que las notificaciones sean nulas; sin embargo, en su parte final dice: “la notificación será
válida cuando a pesar de los defectos enunciados haya cumplido su finalidad” (negrillas
agregadas).

III.2. Notificación por edictos, la declaratoria de rebeldía y como consecuencia el


mandamiento de aprehensión

El legislador ha previsto en algunos casos la vía de la notificación por edictos; así el Tribunal
Constitucional, en su SC 0398/2003-R de 31 de marzo, respecto al art. 165 del CPP, ha señalado
que: “…el mismo Código en su art. 165 prevé la notificación por edicto en dos casos, a saber: a)
cuando no se tenga conocimiento del domicilio y b) cuando se ignore su paradero. En este
último caso, el presupuesto se materializa cuando teniéndose conocimiento del domicilio se ignora
el paradero de las personas a quienes se debe citar”.

Asimismo Conforme a la interpretación efectuada por el Tribunal Constitucional en la SC


0231/2004-R de 17 de febrero, sobre los alcances de la norma prevista por el art. 165 CPP, indica:
“La notificación por edicto no sólo se dispone cuando el imputado o procesado no tiene
domicilio conocido, también se aplica en el supuesto de que tenga domicilio conocido, pero que
a pesar de ello se ignora su paradero; esa previsión normativa tiene la finalidad de evitar la
neutralización de la acción de la justicia, pues un razonamiento en contrario significaría que el
imputado o procesado, teniendo domicilio conocido, se oculte o desaparezca de su domicilio para
evitar ser notificado con la imputación o la acusación, con lo que evitaría que la acción penal
prospere hasta que prescriba la acción, ya que en el nuevo sistema el cómputo del plazo de
prescripción solo se interrumpe por la declaratoria de la rebeldía”.

Cabe aclarar que la finalidad principal de la notificación por edictos es que el proceso no se
paralice y prosiga su curso de manera rápida, sin interrupciones de ninguna naturaleza, al existir un
plazo límite de duración del mismo, (art. 133 del CPP).

En cuanto al objeto de la declaratoria de rebeldía y como consecuencia el mandamiento de


aprehensión, el Tribunal Constitucional, a través de la SC 0222/2011-R de 11 de marzo, refirió
que: “Con la finalidad de evitar las constantes incomparecencias de parte de los procesados a la
distintas audiencias que emergen de la persecución penal y consecuentemente no generar
dilaciones indebidas que a la postre generen no sólo retardación de justicia sino también
denegación de la misma con el efecto inmediato de vulnerar los derechos de la víctima, entre ellos
la tutela judicial efectiva, el ordenamiento procesal vigente tiene previsto a su interior, una serie
de medidas para viabilizar el cumplimiento del principio de celeridad y evitar demoras
injustificadas, es así, que tratándose del imputado, se tiene previsto específicamente en el art. 87
del CPP, un medio compulsivo cual es la declaratoria de rebeldía con sus respectivos efectos que,
entre otros, se encuentra la aprehensión del rebelde, tal cual prevé el art. 89 del citado Código.
Ahora bien, entre las causales para declarar la rebeldía, el art. 87 inc.1) del CPP, establece que:
'El imputado será declarado rebelde cuando no comparezca sin causa justificada a una citación
de conformidad a lo previsto en este Código'; es decir, que respecto de este supuesto la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 558
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

declaratoria de rebeldía se adopta a raíz de la desobediencia al llamamiento judicial o citación de


quien se encuentra sometido a un proceso.

Por otra parte, la SC 0535/2007-R de 28 de junio, indica que: '…la declaratoria de rebeldía tiene
como consecuencia la expedición del mandamiento de aprehensión, el arraigo y la publicación
de los datos y señales personales del imputado en los medios de comunicación, para su búsqueda
y aprehensión, esto con la finalidad de lograr que el declarado rebelde acuda a la citación o
llamamiento judicial y la investigación o el proceso penal continúen'.

Bajo ese entendimiento jurisprudencial, se tiene que la autoridad judicial puede determinar las medidas
cautelares que considere convenientes sobre los bienes del imputado para asegurar la eventual
responsabilidad civil emergente del hecho imputado; la ejecución de la fianza que haya sido prestada,
entre otras medidas (art. 89 del CPP). Es así que la misma SC 0535/2007-R, indicó que: '…el art. 91 del
CPP determina que cuando el rebelde comparezca o sea puesto a disposición de la autoridad que lo
requiera, el proceso continuará su trámite, dejándose sin efecto las órdenes dispuestas a efectos de su
comparecencia, manteniendo las medidas cautelares de carácter real; añadiendo que si el imputado
justifica que no concurrió debido a un grave y legítimo impedimento, la rebeldía será revocada y no
habrá lugar a la ejecución de la fianza'".

Al respecto, cabe referir que la rebeldía es la situación procesal en que se encuentra quien,
existiendo o mediando proceso en su contra, evita o rehuye someterse al mismo, ya sea no
compareciendo, evadiéndose, incumpliendo un llamado judicial o ausentándose sin justa
causa del lugar asignado para residir; es decir, que asume una actitud pasiva e indiferente en el
proceso, con estos antecedentes el Juez mediante resolución expresa y fundamentada puede
declarar la rebeldía, dando lugar a medidas cautelares personales y reales de carácter precautorio,
como ser: expedirse mandamiento de aprehensión, arraigo y otros; entonces se puede decir que el
objetivo principal de la declaratoria rebeldía es lograr la comparecencia del imputado para la
continuación del proceso penal, y en caso de comparecencia voluntaria del rebelde, o que sea
aprehendido y puesto a disposición de la autoridad, el proceso continúa dejándose sin efectos las
órdenes e instrucciones dispuestas salvo las medidas cautelares de carácter real.

III.3. Respecto a la competencia del juez en la acción de libertad

Si bien el art. 125 de la CPE, ha determinado la competencia del juez o tribunal para conocer la
acción de libertad, a los órganos especializados en materia penal; asimismo la jurisprudencia del
Tribunal Constitucional Plurinacional modulando la SC 0756/2011-R de 20 de mayo, ha
establecido a través de la SC 0032/2012-R de 16 de marzo, que las únicas autoridades facultadas
para conocer las acciones de libertad, son los jueces en materia penal; por lo que, ningún otro juez
estaría habilitado para ejercer dicha competencia, ni siguiera en suplencia legal.

Pese a ello debe advertirse que la SC 0032/2012-R que en su apartado III.2.1. refiere a la
aplicación prospectiva de dicho entendimiento, así sostiene que: “La eficacia prospectiva de la
jurisprudencia o conocida también como prospective overruling , referida al cambio de un
precedente vinculante o la sustitución por otro que a partir de la introducción de un nuevo
razonamiento adquiere carácter vinculante en casos posteriores” (subrayado y negrilla son
agregadas), es decir en el presente caso es preciso hacer notar que si bien las sentencias del
Tribunal Constitucional Plurinacional son de carácter vinculante, la sentencia referida ha sido
publicada el 16 de marzo y la fecha de interposición de la presente acción ha sido el 6 de febrero de
2012; razón por la cual se puede evidenciar que la presente acción de libertad ha sido interpuesta
antes de la publicación de dicha Sentencia, por cuanto no corresponde en este caso aplicar el
entendimiento jurisprudencial contenido en dicho fallo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 559


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.4. Análisis del caso concreto

De la revisión de antecedentes que cursan en obrados, se puede colegir que el Tribunal Segundo de
Sentencia de Pando, ante la representación del notificador, ordenó la notificación para el imputado -
ahora accionante-, a cuyo efecto el oficial de diligencias habiéndose constituido en varias oportunidades
en el domicilio señalado por el imputado Willian Fernández Fernández, realizó su representación
indicando que el mismo no fue encontrado y que los vecinos le indicaron que no se encuentra en esa
localidad; a raíz de ello, el Tribunal Segundo de Sentencia de Pando mediante providencia de 5 de
septiembre de 2011, ordenó que se proceda a la notificación con la acusación formal, mediante edictos
de prensa, tal como determina el art. 165 del CPP, puesto que el imputado no tiene domicilio conocido y
se desconoce su paradero. El imputado ahora accionante, al enterarse de la publicación de dichos edictos,
presentó el memorial de 12 de octubre del mismo año, solicitando en la suma lo siguiente: a) Nulidad de
la notificación, pidiendo que se le tenga por notificado, se deje sin efecto cualquier medida u orden de
aprehensión; b) ofrece prueba; y, c) modificación de medidas cautelares; referente a los días en que debe
firmar el libro de asistencia y en la parte final del memorial refiere el cambio de domicilio en la ciudad
de Cobija; sin embargo, no indicó de manera específica el mismo; es así que dicho Tribunal, tomando en
cuenta el memorial, mediante Auto de 26 de octubre de 2011, únicamente señaló audiencia y
posteriormente en otros actuados, resolvió la modificación de medidas cautelares; y en cuanto a las
demás solicitudes, a través de la providencia de 14 de octubre, refirió que con el objeto de proveer la
solicitud de nulidad de notificación, el impetrante indique con exactitud su nuevo domicilio procesal y
real en la ciudad de Cobija; en consecuencia el 17 de enero de 2012, el imputado ahora accionante,
solicitó el desglose de los documentos presentados en audiencia de cesación a la detención preventiva;
mediante providencia de 19 de enero de 2012, el Tribunal Segundo de Sentencia ordeno que con
carácter previo, el impetrante señale su domicilio real y procesal, y se proveerá lo que fuera de Ley, por
todo lo referido se puede evidenciar que las autoridades demandadas en ningún momento se
pronunciaron a cerca de la prueba presentada y tampoco sobre la nulidad de la notificación por edictos,
siendo que antes de considerar los memoriales requiere que el imputado ahora accionante, indique con
exactitud su domicilio procesal.

Por otra parte, el 11 de noviembre de 2011 la Fiscal de Materia de Pando, Blanca Elena Ardaya
Vannucci, devolvió las publicaciones de los edictos solicitando la entrega de mandamientos de
aprehensión; a raíz de ello el Tribunal Segundo de Sentencia, conformado por las autoridades
ahora demandadas, emitió el Auto de 19 de enero de 2012, fundamentando que al tener constancia
de la publicación de los edictos, pudo verificar su difusión; empero, el imputado ahora accionante,
“no se presentó ante ese Tribunal y tampoco justificó su incomparecencia al proceso para que
pueda asumir su defensa”, motivo por el cual, lo declaró rebelde a la ley y dispuso el mandamiento
de aprehensión y otros.

En ese entendido -en el presente caso-, con relación a la supuesta ilegalidad de la declaración de rebeldía
-Auto de 19 de enero de 2012- conforme a la normativa prevista en los fundamentos jurídicos referidos
en la presente Sentencia, el imputado puede ser declarado rebelde cuando no comparezca ante el proceso
sin justa causa a una citación de conformidad a lo previsto en el Código de Procedimiento Penal. Ahora
bien, conforme se tiene que las notificaciones de 4 y 10 de octubre de 2011, efectuadas por edictos, -
solicitada por la fiscal y dispuesta por las autoridades demandadas-, fueron legales, ya que se desconocía
el paradero del imputado; sin embargo, después de haberse publicado los mismos, el imputado ahora
accionante se apersonó ante el proceso mediante memorial de 12 de octubre del citado año; de lo que se
puede colegir que las notificaciones publicadas mediante edictos cumplieron su finalidad, ya que el
accionante tuvo conocimiento de la radicatoria de la causa y cuando se apersonó solicitó la nulidad de las
notificaciones y adjuntó prueba; es decir, asumió defensa pero con celo funcionario e ignorándose el
propósito de los edictos no fue aceptado su apersonamiento bajo el pretexto de que previamente indique
domicilio procesal y personal, cuando en todo caso correspondía aplicar el art. 162 del CPP; vale decir,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 560


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tener por señalado el domicilio procesal en estrados judiciales con la advertencia de que toda ausencia
provocará una nueva declaratoria de rebeldía.

Por otro lado, en el memorial de 12 de octubre de 2011 presentado por el imputado, luego de las
publicaciones de los edictos, también pidió la modificación de medidas cautelares, las mismas que
a través de tres audiencias fueron suspendidas en reiteradas oportunidades y notificadas al
imputado o a su abogado patrocinante, en la última se procedió a modificar las medidas cautelares
solicitadas, situación por la que se puede evidenciar que el imputado ahora accionante, tenía
conocimiento de todas las actuaciones dentro del proceso, razón por la que no procedía la
declaración de rebeldía ya que no fue dispuesta de acuerdo a las normas previstas por los arts. 87.1
y 89 del CPP, de considerarse que la falta de señalamiento de domicilio procesal y personal, y
antecedentes a la notificación por edictos, debió analizarse en el ámbito y contexto de las medidas
cautelares referidas.

Es decir que la prueba que ofreció el accionante y su solicitud de nulidad no podían estar
supeditadas al señalamiento de domicilio y al haberse cumplido el propósito de la notificación por
edictos no correspondía la declaratoria de rebeldía del accionante, menos aún si el imputado fue
notificado en reiteradas ocasiones para que se lleve a cabo la audiencia de modificación de
medidas cautelares, así como se explicó en el párrafo anterior y dicha circunstancia no fue valorada
en la misma.

Con referencia al mandamiento de aprehensión dispuesto que se expida por las autoridades
demandadas, cabe mencionar que dicha decisión, puede ser calificada de ilegal, siendo que es una
consecuencia de la declaratoria de rebeldía y ésta en aplicación al presente caso se constituye una
medida excesiva por parte de las autoridades demandadas, puesto que a momento de que el
imputado se apersonó mediante memorial, ya no procedía la declaratoria de rebeldía y solamente
en el caso de que el imputado no hubiera comparecido ante el proceso, se podía adoptar las
medidas correspondientes, toda vez que la publicación de los edictos y la declaratoria de rebeldía
tienen su propia finalidad cumplida en caso de autos.

En consecuencia, por los fundamentos esgrimidos anteriormente y al establecer la ilegalidad de la


declaratoria de rebeldía del procesado -ahora accionante-, el mandamiento de aprehensión
expedido por las autoridades demandadas resulta ser ilegal y ante la disposición de dichas medidas
se ha vulnerado el derecho a la libertad del accionante; por lo que, corresponde conceder la tutela
solicitada.
En consecuencia el Juez de garantías, al conceder la tutela solicitada, ha actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 06/2012 de
7 de febrero, cursante de fs. 88 vta. a 90, dictada por el Juez Primero de Partido en lo Civil y
Comercial del Tribunal Departamental de Justicia de Pando; y en consecuencia CONCEDER la
tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 561


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0090/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00085-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 03/2012 de 27 de enero, cursante de fs. 48 a 50, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Luis Andrés Ritter Zamora en representación sin
mandato de Esperanza Flores Gonzáles contra William Tórrez Tordoya y Edgar Carrasco
Sequeiros, Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de
Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 27 de enero de 2012, cursante de fs. 38 a 40 vta., el accionante


expone que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 10 de septiembre de 2011, se llevó a cabo la audiencia de medidas cautelares de su


representada, por el delito de legitimación de ganancias ilícitas y otros, determinándose su
detención preventiva con los fundamentos de que pese a tener un domicilio establecido y una
familia legalmente constituida, sin embargo, no ha podido demostrar un trabajo u ocupación
lícita; de la misma manera al no tener una arraigo natural, respecto a que pueda abandonar el
país, no ha desvirtuado el peligro de fuga, según lo establecido por los arts. 234.1, y 2 del
Código de Procedimiento Penal (CPP), continúa relatando, que el 5 de diciembre del mismo
año, se llevó a cabo la audiencia de cesación de detención preventiva en la que el Juez dispuso la
libertad de su representada, imponiéndole medidas sustitutivas, bajo el fundamento de que el
derecho a la vida es un derecho fundamental protegido constitucionalmente y que se encuentra
por encima de los demás derechos; dicha situación se produjo debido a que su representada
presentó certificados médicos avalados tanto por médicos particulares, así como del médico
forense Hugo Cuellar Villagra, que certificó y diagnosticó que padecía de cáncer de cuello
uterino, que se realiza tratamientos de quimioterapia y radioterapia; añade el accionante, que la
salud de su representada se ha agravado, que según certificado médico se encuentra internada
por dengue hemorrágico y que todos los profesionales han coincidido en la gravedad del estado
de salud en el que se encuentra, por lo que si es detenida preventivamente su vida corre peligro,
además de que debe tomarse en cuenta que ha venido cumpliendo las medidas sustitutivas que le
ha impuesto el Juez cautelar, y que no pueden sacarla de la clínica de manera arbitraria sin
importar que muera en el camino.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 562


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante denuncia la vulneración de los derechos de su representada a la vida y la salud, en


vinculación con el de la libertad sin citar los artículos de la Constitución Política del Estado que
los contiene.

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita se conceda la tutela solicitada y se declare procedente, se anule el Auto de


Vista, se ordene el señalamiento de nueva audiencia de apelación, la cual se resuelva conforme a
ley precautelando el derecho a la vida y a la salud, de su representada.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 27 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 46
a 50, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante en audiencia, ratificó y amplió su demanda indicando que el Estado mediante la


Constitución Política del Estado a través del art. 125, ha creado un medio de defensa idóneo y
rápido denominado acción de libertad, que establece que esta acción se puede presentar con el
objetivo de restablecer formalidades legales para evitar la vulneración del debido proceso, señala
también que el art. 124 del Código de Procedimiento Penal (CPP), establece que las sentencias y
autos interlocutorios deben ser fundamentados, expresando los motivos de hecho y de derecho
en el que basan sus decisiones y el valor otorgado a la prueba, ya que la fundamentación no
puede ser reemplazada por la simple relación de documentos o la mención de requerimientos de
las partes, manifiesta el accionante, que la línea jurisprudencial ha establecido que la motivación
de los fallos judiciales está vinculada al derecho del debido proceso y la tutela judicial efectiva
consagrado en la Constitución Política del Estado, continua señalando que según los datos del
proceso, los Vocales demandados dejaron sin efecto la Resolución que imponía a su defendida
medidas sustitutivas pronunciada por el Juez a quo, sin haber efectuado una valoración integral
de elementos probatorios como corresponde, y en ese sentido el Auto de Vista pronunciado por
los mencionados Vocales carece de la debida fundamentación ya que no han tomado en cuenta
el art. 124 de la CPP, por lo que se le debe conceder la tutela solicitada, asimismo, corresponde
anular la mencionada Resolución; añade también que es importante establecer los derechos a la
vida y la salud, y que los arts. 5 y 6 del CPP; establecen que las medidas cautelares se aplicarán
de manera que perjudiquen lo menos posible al imputado, indicando además, que el Juez de
garantías no tiene competencia para analizar lo valorado por los tribunales ordinarios, pero si
para establecer que se fundamente una resolución de manera coherente y valorar la
documentación que respalda que su representada se encuentra en un grave estado de salud y que
su vida corre peligro al padecer cáncer terminal y dengue hemorrágico, ya que el derecho a la
vida es un presupuesto indispensable, que se restablezcan las formalidades legales anulando el
Auto referido y otorgándole a su representada una Resolución fundada en derecho.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

William Tórrez Tordoya y Edgar Carrasco Sequeiros, Vocales de la Sala Penal Primera del
Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, presentaron informe escrito, cursante a fs. 45
y vta., en el cual expresaron que: a) Se llevó a cabo en su Tribunal audiencia de apelación de
medida cautelar, donde luego de escuchar a la parte apelante decidieron revocar la cesación a la
detención preventiva que se le impuso a la representada del accionante; b) Su actuación ha sido
legal, ya que como tribunal de apelación revocaron la Resolución puesta en su conocimiento en
ejercicio pleno de su jurisdicción y competencia, resolviendo dicha medida que por su
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 563
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

naturaleza y características son modificables o revocables aun de oficio, como determina el art.
250 del CPP; por lo que, la resolución de las mismas no causan estado, lo que hace inviable
modificar una medida cautelar por la vía constitucional; c) Para la interposición de un recurso
constitucional se deben agotar todos los medios de impugnación ordinarios, previamente a
invocar la protección de la acción de libertad; d) En el caso presente como se puede acudir a la
vía constitucional, si no se acudió a la vía de la reconsideración de la medida cautelar impuesta y
a la apelación incidental en su caso; y, e) Como Tribunal de apelación han resuelto todas las
peticiones y puntos apelados, detallando uno por uno los riesgos procesales, haciendo una
correcta valoración integral e interpretación legal.

I.2.3. Resolución

El Juez Tercero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, Walter
Pérez Lora, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 03/2012 de 27 de enero,
cursante de fs. 48 a 50, denegando la tutela solicitada con los siguientes fundamentos: 1) Que
en la presente acción son dos puntos los que se cuestionan, el derecho a la salud y la violación al
debido proceso por la falta de fundamentación en la Resolución emitida por los Vocales del Sala
Penal Primera; 2) Con relación al derecho a la vida, se tiene que la acción de libertad está
consagrada en el art. 125 de la CPE, cuya esencia es la protección de la libertad, siendo
extensiva según la nueva configuración de la Constitución Política del Estado al derecho de la
vida y la libertad de locomoción; 3) Al establecer que la supuesta revocatoria de las medidas
sustitutivas a la detención preventiva violan el derecho a la vida de la imputada Esperanza Flores
Gonzáles; sin embargo, los argumentos expuestos por la parte accionante no han sido
debidamente acreditados, a pesar de que cursen en el expediente certificados médico forenses
que indican que la imputada se encontraría en grave estado de salud; y 4) La revocatoria de las
medidas sustitutivas es un acto jurisdiccional del Tribunal Departamental de Justicia a través de
sus Salas Penales; sin embargo, no existe documentación en la cual conste que los Vocales
demandados hubiesen ordenado o prohibido que la imputada, reciba un tratamiento debido y
adecuado; 5) En el presente caso, los supuestos actos ilegales no están vinculados con el derecho
a la libertad sino que son cuestiones que forman parte del desenvolvimiento procesal dentro del
actuar de la Sala Penal, la cual mediante el recurso de apelación tomó conocimiento y dictó una
resolución dentro del marco establecido por el art. 33 y ss. del CPP; y, 6) En el presente caso, el
Ministerio Público recurrió en apelación contra una Resolución del Juez Séptimo de Instrucción
en lo Penal, que otorgó la cesación de la detención preventiva de la imputada, Resolución que en
audiencia y en cumplimiento de los requisitos legales fue revocada por la Sala Penal Primera.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Cursan diferentes certificados e informes médicos relativos a la salud y estado de la


representada del accionante, con el siguiente detalle:

Penitenciario del Penal de Palmasola, que indica que la paciente Esperanza Flores Gonzáles,
requiere una valoración por ginecología y oncología, realización de exámenes de laboratorio en
el Hospital Oncológico, y si fuese necesario internación de forma urgente (fs. 2).

certifica que la imputada, es portadora de Cáncer Cervical, siendo sometida a cirugía, y


realizando quimioterapia de seis ciclos y radioterapia a dosis total, estando bajo control riguroso
de su patología de cáncer de cuello uterino (fs. 3).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 564
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

el Juez Séptimo
de Instrucción en lo Penal, Arturo Vargas Cruz, ordenando la realización de examen médico
forense a la imputada Esperanza Flores Gonzáles (fs. 4).

Certificado médico forense de 10 de noviembre del mencionado año, expedido por Hugo Cuellar
Villagra, que certifica que en base al examen físico realizado a la detenida, concluye que la
misma se encuentra con post tratamiento quirúrgico, de radioterapia y quimioterapia de cáncer
de cuello uterino, presentando nódulos dolorosos en diferentes partes del cuerpo, por lo que el
médico forense recomienda una valoración actualizada en el Instituto Oncológico del Oriente
Boliviano (fs. 5 a 6).

Cursan certificado médico extendido por Juan Romero Singo y exámenes de laboratorio de la
Clínica Médica SIRANI, los cuales certifican que la paciente Esperanza Flores Gonzáles, se
encuentra hospitalizada en dicho nosocomio, por presentar síntomas de dengue hemorrágico (fs.
8 a 12).

II.2. El 5 de diciembre de 2012, se realizó la audiencia de cesación de la detención preventiva


solicitada por la imputada, en el Juzgado Séptimo de Instrucción en lo Penal, en la que el Juez
Arturo Vargas Cruz impuso medidas sustitutivas previstas en el art. 240 del CPP a la
representada del accionante, con los siguientes fundamentos: i) La imputada presentó un
contrato de trabajo para que preste el servicio de acopiadora de arroz, en el Ingenio Arrocero Las
Lomas, que tiene todo el valor probatorio y que el Ministerio Público en su momento ha tenido
setenta y dos horas a partir de su notificación tal como establece la norma, para determinar si el
NIT de esa empresa funciona actualmente, con lo que el riesgo de peligro de fuga establecido en
el art. 234.1 del CPP ha desaparecido; ii) En relación al art. 234.2 de la Norma Procesal Penal, el
Ministerio Público realizó observaciones puntuales en el sentido de que la imputada había
comprado pasajes en diferentes líneas aéreas con destino a la ciudad de México, y la defensa
tampoco ha presentado un flujo migratorio que pueda sostener que la imputada no ha
abandonado el país en ningún momento, pero en contrasentido ha presentado diferentes
certificados médicos forenses que indican el mal estado de salud de Esperanza Flores Gonzáles
portadora de cáncer cervical, en los que se recomienda la valoración del Instituto Oncológico; y,
iii) El derecho a la vida es un derecho fundamental protegido constitucionalmente, que se
encuentra por encima de los demás derechos por ser de primera generación, lo que significa que
la imputada al encontrarse en mal estado de salud en el Centro de rehabilitación de Palmasola,
no cuenta con los equipos médicos necesarios, para que pueda seguir realizando su tratamiento
(fs. 18 a 23).

II.3. El Fiscal de Materia, José Parra, terminada la audiencia de cesación a la detención


preventiva, interpuso recurso de apelación contra la Resolución de 5 de diciembre de 2011, que
impone medidas sustitutivas a la imputada (fs. 23 vta.).

II.4. Mediante Auto de Vista de 5 de diciembre de 2011, el Juez cautelar dispuso la remisión de
la apelación ante el Tribunal Departamental de Justicia (fs. 23 vta.).

II.5. Se verifica que, en la Sentencia emitida por el Juez de garantías, en la parte de


CONCLUSIONES SOBRE LA CAUSA ANALIZADA, tercer punto del CONSIDERANDO,
que la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, mediante Auto
de Vista de 26 de enero de “2011”, revocó la Resolución venida en apelación, disponiendo
nuevamente la detención preventiva de la representada del accionante, Esperanza Flores
Gonzáles en el Penal de Palmasola (fs. 48 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 565
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante en representación de Esperanza Flores Gonzáles, señala que el 11 de septiembre


de 2011, a través de audiencia de medidas cautelares, su representada fue detenida
preventivamente en el Penal de Palmasola de la ciudad de Santa Cruz, por el delito de
legitimación de ganancias ilícitas, añade que el 5 de diciembre del mismo año fue beneficiada
con medidas sustitutivas a la detención preventiva, debido a que presentó diferentes certificados
y exámenes que acreditan que padece de cáncer de cuello uterino y que requiere de una
valoración integral en una institución especializada, ante dicha resolución el Ministerio Público
planteó recurso de apelación que fue remitido a la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Santa Cruz, que por Auto de Vista de “26 de enero de 2011”,
revocó las medidas sustitutivas impuestas a la imputada, motivo por el cual el accionante plantea
acción de libertad, solicitando se anule el referido Auto de Vista y se programe nueva audiencia
en la que se le otorgue a su representada una resolución debidamente fundamentada, y se
garantice su derecho a la vida y la salud que están estrechamente vinculadas, al derecho a la
libertad, además de que su vida corre peligro al encontrarse internada en la Clínica SIRARI, con
diagnóstico de dengue hemorrágico.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

La Ley Fundamental, en su Capítulo Segundo “Acciones de Defensa”, instituye la acción de


libertad, precisando: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad” (art. 125).

Asimismo la SC 2209/2010-R de 19 de noviembre, expresa que: “Este mecanismo


extraordinario de protección, se halla consagrado en el art. 125 de la CPE, como una acción
jurisdiccional de rango constitucional que está destinada a la defensa y protección del derecho
a la vida y a la libertad personal, manteniendo su fin esencial tal cual es, ser una acción tutelar
preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza sobre todo el
derecho a la libertad personal y ampliando su núcleo esencial y otorgando un paraguas más
amplio, protegiendo el derecho a la vida, siempre y cuando ésta esté relacionada con el derecho
a la libertad; asimismo, restablece lesiones a la garantía del debido proceso cuando existe un
nexo directo con este derecho, es decir, que el acto ilegal que se demanda, esté interconectado
con la amenaza o restricción o supresión de este derecho”.

Complementando los alcances de esta acción tutelar, el Tribunal Constitucional a través de la SC


0023/2010-R de 13 de abril, señaló que: “…la nueva Constitución Política del Estado, es más
amplia en cuanto a su ámbito de protección, pues éste se extiende al derecho a la vida, y en
cuanto al derecho a la libertad, en ambos casos, de manera expresa en la Constitución Política
del Estado vigente, la protección está destinada al derecho a la libertad física o personal…”.

III.2. La acción de libertad en cuanto a la valoración de la prueba

A través de la jurisprudencia constitucional, se ha establecido ciertos límites respecto al recurso


de hábeas corpus ahora acción de libertad, dentro de los que se encuentra la valoración de la
prueba realizada por la justicia ordinaria, razonamiento que de acuerdo a la SC 1085/2005-R de
12 de septiembre, se indicó que: “…la recurrente estima como acto ilegal restrictivo de los
derechos invocados, entre los cuales está el derecho a la libertad, la revocatoria que en
apelación dispusieron los Vocales demandados de la cesación de la detención preventiva a
favor de su representado, decisión que conforme se evidencia de los antecedentes que cursan en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 566
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

obrados, fue motivada fundamentalmente en la valoración de los elementos probatorios


aportados por las partes, valoración que conforme a lo sostenido por el art. 173 del CPP,
corresponde al juez o tribunal en base a las reglas de la sana crítica, por lo que al respecto
resulta pertinente remitirse a lo señalado por la jurisprudencia de este Tribunal en la SC
0162/2000-R de 25 de febrero, en la que refiriéndose al hábeas corpus se expresó que este
recurso '(...) no puede ser utilizado para revisar resoluciones dictadas por autoridades
judiciales en pleno y legal ejercicio de sus atribuciones jurisdiccionales y menos para
establecer si efectuaron una correcta valoración de las pruebas destinadas a determinar la
existencia o no de materia justiciable (...)'. Asimismo, dicha jurisprudencia en la SC 0873/2004-
R, de 8 de junio, determinó que: 'la compulsa de las pruebas que se aporten con el fin de
obtener la cesación de la detención preventiva, es facultad exclusiva del Juez cautelar que esté
a cargo del control de la investigación, pues en los únicos casos que este Tribunal puede
intervenir en la revisión de dicho análisis será cuando el juzgador se hubiera apartado de las
previsiones legales que rigen el acto procesal como de los marcos de razonabilidad y equidad
previsibles para decidir, si estos casos no se dan, esta jurisdicción no puede intervenir para
dejar sin efecto la resolución que conceda la cesación o la rechace, ya que ello importaría una
doble valoración de la prueba'.

Finalmente, en la SC 0651/2005-R, de 14 de junio se estableció que: '(...) los Vocales recurridos


al dictar el Auto de Vista 37/2004, han obrado conforme a sus facultades jurisdiccionales
valorando la prueba aportada por el actor, toda vez que la misma debe cumplir con los
requisitos de forma y contenido, más aún cuando por determinación del art. 250 del CPP, el
Auto que imponga una medida cautelar o la rechace es revocable o modificable, aún de
oficio, es decir no causa estado, el recurrente puede volver a solicitar la cesación de su
detención preventiva cuando nuevos elementos de juicio demuestren que no concurren los
motivos que la fundaron o tornen conveniente que sea sustituida por otra medida como señala
el art. 239.1 del CPP'” (las negrillas son añadidas).

III.3. De la obligación del juzgador a fundamentar y motivar las resoluciones

Sobre este aspecto el Tribunal Constitucional determinó a través de la SC 1093/2011-R de 16 de


agosto, que: “Las resoluciones que resuelven una solicitud o reclamo, deben contener una
motivación coherente con el ordenamiento jurídico, exponiendo de forma clara y precisa los
fundamentos que llevaron a la autoridad a resolver el caso de una u otra forma, satisfaciendo
todos los aspectos demandados; caso contrario, se estaría vulnerando el derecho y garantía del
debido proceso.

Cabe aclarar, no obstante, que no se puede exigir como fundamentación una argumentación
retórica intrascendente, sino más bien la adecuación de los hechos a la norma jurídica…”.

Asimismo la SC 0089/2010-R de 4 de mayo, en relación a la obligación de fundamentar la


resoluciones refiere que: “En los casos en que un Tribunal de apelación decida revocar las
medidas sustitutivas y a la par disponer la aplicación de la detención preventiva de un
imputado, está obligado igualmente a dictar una resolución debidamente fundamentada sobre
la necesidad de aplicar dicha medida cautelar de carácter personal, explicando la concurrencia
de los dos requisitos determinados en el art. 233 del CPP. En ese sentido, se ha establecido que
el Tribunal de apelación, está obligado a motivar y fundamentar su resolución, precisando los
elementos de convicción que le permiten concluir en la necesidad de revocar las medidas
sustitutivas y aplicar la detención preventiva; a cuyo efecto, debe también justificar la
concurrencia de los presupuestos jurídicos exigidos por el art. 233 del CPP y una o varias de
las circunstancias señaladas por los arts. 234 y 235 del CPP, mediante una resolución
debidamente fundamentada, conforme exige el art. 236 del CPP, puesto que sólo cuando se
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 567
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

han fundamentado debidamente estas dos situaciones, se puede disponer la detención


preventiva (las negrillas nos pertenecen).

Asimismo, la fundamentación de las resoluciones judiciales no sólo es exigible al momento de


imponer la detención preventiva, sino también cuando se rechaza la solicitud de cesación de la
detención preventiva, se dispone la sustitución o modificación de esa medida o, finalmente,
cuando se la revoca; aclarándose que la fundamentación se exige tanto en las resoluciones
pronunciadas en primera instancia, como aquellas emitidas en apelación y en toda decisión
judicial.

Ahora bien, por regla general, las resoluciones pronunciadas en apelación, en virtud a lo
establecido por el art. 398 del CPP, deben circunscribirse a los aspectos cuestionados en la
resolución. Sin embargo, esta limitación no significa que las autoridades judiciales, en
apelación, deban abstenerse de realizar el análisis sobre los supuestos previstos en el art. 233
del CPP, pues esa obligación les es exigible cuando tengan que revocar la resolución del
inferior que impuso medidas sustitutivas; es decir, los Vocales deben precisar los elementos de
convicción que les permitan concluir en la necesidad de revocar las medidas sustitutivas y
aplicar la detención preventiva, debiendo justificar la concurrencia de los presupuestos
jurídicos exigidos en el art. 233 del CPP” (las negrillas son nuestras).

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso presente el accionante por su representada, expresa que la misma fue beneficiada con
la Resolución de 5 de diciembre de 2011, que le imponía medidas sustitutivas a la detención
preventiva, luego de presentar certificados, tanto médico forenses como particulares, que
certifican que su representada padece de cáncer de cuello uterino, ante esta Resolución, el
Ministerio Público presentó recurso de apelación, mismo que fue elevado en conocimiento de
los Vocales de la Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz,
quienes después de realizar una nueva valoración de la prueba, revocaron la referida Resolución,
imponiéndole nuevamente la detención preventiva en el Penal de Palmasola, con estos motivos
el accionante plantea acción de libertad solicitando la anulación del “Auto de Vista de 26 de
enero de 2011”, que dispuso la revocatoria de la Resolución que otorgó las medidas sustitutivas
a su defendida, con el argumento de que el referido Auto, carece de fundamentación, vulnerando
el debido proceso, y se señale nueva audiencia en la que se resuelva la apelación conforme a ley,
resguardando el derecho a la vida y la salud de su representada.

De todo lo expuesto, y en base al Fundamento Jurídico III.2 del presente fallo, es necesario
hacer alusión a la actuación de los Vocales demandados, los mismos que al haber revocado al
Auto de 5 de diciembre de 2011, han actuado dentro de las facultades que la ley les otorga, ya
que el art. 173 del CPP, les faculta a los jueces o tribunales a asignar el valor correspondiente a
los elementos de prueba presentados con aplicación a las reglas de la sana crítica, es decir que
los certificados médicos presentados como elementos de prueba, para los Vocales demandados
no son suficientes para desvirtuar los motivos que fundaron la detención preventiva dentro de las
medidas cautelares, esto no implica que dichos Vocales se hayan apartado del criterio de la
razonabilidad y de la equidad al valorar los elementos aportados por la parte accionante; a su
vez, es necesario hacer notar que al haberse revocado las medidas sustitutivas de la representada
del accionante, no significa que la misma no pueda volver a solicitar la cesación de la detención
preventiva, ya que como reza el art. 250 del CPP, “El Auto que imponga una medida cautelar o
la rechace es modificable, aún de oficio”; es decir, que no causan estado, reiterando que la parte
demandante en su momento puede volver a solicitar la referida cesación, aportando nuevos
elementos que desvirtúen los riesgos procesales.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 568


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En lo que respecta, al hecho de que se estaría vulnerando el derecho a la salud y la vida de la


imputada, al determinar nuevamente su detención preventiva, se confirma lo afirmado por el
Juez de garantías, ya que se observa que en ningún momento se le está negando a la
representada del accionante, pueda ser atendida por médicos e institutos especializados, durante
su detención, pudiendo solicitar al Juez del proceso los permisos que sean necesarios, para
asistir a las sesiones y tratamientos médicos que requiera en observancia del art. 238 CPP, o en
su caso lo establecido por los arts. 96 y 109.1 de la Ley de Ejecución Penal y Supervisión.

Por los fundamentos anotados precedentemente se confirma que el presente caso no se encuentra
dentro de las previsiones y alcances de la acción de libertad, por lo que el Juez de garantías al
haber denegado la tutela impetrada, a través de la presente acción de defensa, obró
correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 03/2012
de 27 de enero, cursante de fs. 48 a 50, pronunciada por los Vocales de la Sala Penal Primera del
Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz y en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra.Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0093/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad
Expediente: 00082-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 02/2012 de 6 de febrero, cursante de fs. 32 a 37, pronunciada, dentro


de la acción de libertad interpuesta por Edwin Murga Chambi contra Karina Estela Barea
Márquez, Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal y Beymar Cartagena Catari,
Secretario del Juzgado Segundo de Instrucción en lo Penal, ambos de El Alto, del Distrito
Judicial de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 3 de febrero de 2012, cursante de fs. 2 a 4 vta., el accionante expone
los siguientes fundamentos:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 569


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante manifiesta que en el mes de agosto de 2011, fue injustamente imputado por la
presunta comisión del delito de robo agravado de un vehículo, a instancia del Ministerio Público
proceso que se encuentra en conocimiento de Karina Barea Márquez, Jueza Tercera de
Instrucción en lo Penal de El Alto, en suplencia de su similar Segundo. Explica que en audiencia
de medida cautelar efectuada el 29 del mismo mes y año, se dispuso su detención preventiva,
por lo que en uso de sus derechos, solicitó en reiteradas oportunidades la cesación de la misma.

Señala que en la última audiencia efectuada el 12 de enero de este año, la autoridad demandada
rechazó su petitorio de cesación su detención preventiva, por lo que en la misma audiencia
interpuso recurso de apelación contra dicha Resolución. Sin embargo, pese a que ha transcurrido
más de veintidós días de haberse concedido la apelación y no obstante que anunció una acción
constitucional, los plazos procesales fueron incumplidos con relación a la remisión de obrados
ante el Tribunal de alzada. Este extremo vulnera sus derechos y los principios constitucionales,
lo que a su vez, implica retardación de justicia, mas aún cuando se encuentra detenido
preventivamente.

Aclara que su señor padre dejó los recaudos de ley para el sacado de fotocopias y “otras
diligencias” solicitadas por los funcionarios asistentes.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la lesión de sus derechos a la libertad y al debido proceso, sin citar la norma

I.1.3. Petitorio

Se solicita se conceda la tutela demandada y se ordene su inmediata libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 6 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 30
a 31 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado del accionante, ratificó en su integridad el contenido de la acción de libertad,


aclarando que el mismo día en que se concedió la apelación, el padre del accionado dejó como
recaudos la suma de Bs40.- (cuarenta bolivianos). Al mismo tiempo, sostiene que el art. 180 de
la Constitución Política del Estado (CPE), al referirse a uno de los principios de la jurisdicción
ordinaria, cita a la gratuidad, principio que no pueden dejar de considerar los demandados, pues
el Departamento Financiero del Poder Judicial otorga recursos para prever este tipo de
acontecimientos.

I.2.2. Informe de la autoridad y servidor público judicial demandados

Karina Estela Barea Márquez, Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal, ausente en la audiencia,
presentó informe escrito, cursante a fs. 16, señalando: a) Mediante Resolución 228/2011 de 29
de agosto, se dispuso la detención de Edwin Murga Chambi y otros, por cumplir los
presupuestos de los arts. 233.1 y 2, 234numerales 1, 2, 4 y 235 numerales 1, 2; y 4 del CPP; b)
El accionante solicitó la cesación de su detención preventiva, solicitud que fue rechazada en
audiencia del 12 de enero del mencionado año, por no cumplir con lo previsto por el art. 239. del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 570
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Código de Procedimiento Penal (CPP). Dicha Resolución fue apelada en audiencia, conforme al
art. 251 de la misma norma disponiéndose su remisión al Tribunal de alzada, previa notificación
a las partes, diligencias que fueron remitidas a la central de notificaciones, las que a su vez,
fueron devueltas el 31 de enero de 2012; y, c) Por informe de Secretaría del Juzgado Segundo de
Instrucción en lo Penal, el 3 de febrero de igual año, a horas 8:30, la parte apelante pretendió
sacar fotocopias respectivas del proceso, pero no lo hizo y que, al ser más de cien fojas, el
Juzgado no pudo correr con los gastos necesarios, toda vez que personalmente en horas de la
tarde del día señalado se procedió a la remisión del recurso de apelación ante el Tribunal de
alzada.

Beymar Cartagena Catari, Secretario del Juzgado de Instrucción Segundo en lo Penal, informó
lo siguiente: 1) En audiencia de cesación a la detención preventiva realizada el 12 de enero del
mismo año a horas 17:30, se rechazó la solicitud del imputado, por no haber desvirtuado lo
establecido en los arts. 234.5 y 235.1 y 2 del CPP; 2) En la misma audiencia el accionante
planteó el recurso de apelación contra la Resolución 13/2012, solicitando se remita dentro de
veinticuatro horas al Tribunal de alzada para su revisión; y, 3) Se remitió a la Central de
Notificaciones las correspondientes piezas para las diligencias de notificaciones a las partes, las
cuales fueron devueltas el 31 de enero del mismo año, a horas 10:30, además que el 3 de febrero
de igual año a horas 08:30, se constituyó el padre del imputado Edwin Murga Chambi para sacar
fotocopias de ley para la remisión de la correspondiente apelación.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, Henry Sánchez Camacho, Juez Primero de Partido y de Sentencia de El


Alto del Distrito Judicial de La Paz, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución
02/2012 de 6 de febrero cursante de fs. 32 a 36, que concedió la tutela solicitada, sin disponer la
libertad del accionante, toda vez que existe un recurso de apelación interpuesto y aceptado sobre
el rechazo de cesación a su detención preventiva, con los siguientes fundamentos: i) Los
demandados incumplieron lo previsto por el art. 251.I del CPP, por no haber remitido los
antecedentes en veinticuatro horas, omisión que vulneró el debido proceso, relacionado con el
derecho a la libertad en la tramitación de medida cautelar de carácter personal, mucho más
cuando se trata de causas con detenido; ii) Al haberse elevado el recurso de apelación al
Tribunal de alzada en veintidós días y no en veinticuatro horas como refiere en su informe la
autoridad demandada, se restringió el derecho del accionante a que el rechazo a la cesación de la
detención preventiva sea revisado oportunamente; y, iii) En el presente caso, el Secretario del
Juzgado de Instrucción Segundo en lo Penal de El Alto, no cumplió lo ordenado en fs. 433 por la
Jueza señalada, ni tomó las previsiones para cumplir expresamente con el art. 251 del CPP,
incurriendo en demora injustificada al remitir antecedentes del recurso de apelación al Tribunal
de alzada.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones
que se señala:

II.1. En la audiencia de consideración de la solicitud de cesación de detención preventiva


llevada a cabo el 12 de enero de 2012, dentro el proceso penal seguido por el Ministerio Público
contra Edwin Murga Chambi, por el delito de robo agravado, mediante Resolución 13/2011 de
12 de enero de 2012, la Jueza demandada rechazó la solicitud de cesación de la detención
preventiva planteada por el ahora accionante (fs. 20 y 21 vta.). En la misma audiencia, el
accionante planteó el recurso de apelación contra la “Resolución 13/2011” que rechaza la
cesación a la detención preventiva, notificados a las partes (fs. 22 a 25).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 571
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. Por memorial de 17 de enero de 2012, Edwin Murguía Chambi, repone papeleta de pago de
recurso de apelación y pide se ordene la remisión de obrados a la Corte Superior de Distrito (fs.
27 y vta.).

II.3. Remitido el cuaderno de control jurisdiccional a la Central de Notificaciones, a efectos de


poner en conocimiento de las partes los actuados judiciales, el mismo fue devuelto al Juzgado
Segundo de Instrucción en lo Penal de El Alto, el 31 de enero de 2012 ( fs. 28 vta.).

II.4. Mediante oficio 61/12 de 3 de febrero de 2012, la Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal
remite al Presidente y Vocales de la Sala Penal de turno de la “Corte Superior del Distrito” de
La Paz, antecedentes en copias legalizadas para su consideración y resolución en grado de
apelación de la Resolución 13/12 de (fs. 29).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, denuncia que se vulneraron sus derechos a la libertad y al debido proceso, toda
vez que por Resolución se le rechazó la solicitud de cesación de su detención preventiva, los
actuados pertinentes fueron remitidos ante el Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,
luego de más de veintidós días y no en el plazo previsto por el art. 251 del CPP; por
consiguiente, corresponde analizar en revisión, si los hechos denunciados son evidentes y si en
el caso concreto las autoridades demandadas, vulneraron los derechos del accionante.

III.1. Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la acción de


libertad elevada en revisión, es pertinente referirse a algunos aspectos inherentes a la acción de
libertad instituida en la Constitución Política del Estado. Particularmente sobre los derechos a la
vida y a la libertad personal, así como a la naturaleza de la institución jurídica constitucional y el
entendimiento de la jurisprudencia constitucional, remarcando y tal como prevé la Constitución,
el enunciado normativo sobre las formas de resolución en las acciones de libertad.

III.1.1. El Derecho a la vida y a la libertad personal en la Constitución


Política del Estado

Bolivia es un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, que sustenta, entre
otros valores, la dignidad y libertad de las personas, tal como establece el art. 8 de la CPE; la
misma que, además, en el art 22, expresamente establece que “La dignidad y la libertad de la
persona son inviolables” y “Respetarlas y protegerlas es deber primordial del Estado”.

Si bien estos enunciados hacen referencia a la “libertad”, hace en su acepción más general, como
sobre el valor de Libertad. Empero supone, para cada individuo o colectividad, la posibilidad de
actuar de forma autónoma como partícipe en la sociedad, en todos sus ámbitos posibles y, en
general, exenta de todo tipo de restricciones, salvo las establecidas en el sistema normativo
constitucional.

Dentro del sin número de libertades o derechos -según se vea- que la teoría o doctrina podría
referir, o que la norma y la jurisprudencia constitucional han establecido, se encuentra la libertad
personal, la misma que conforme precisa en el art. 23.I de la Ley Suprema del ordenamiento
jurídico, refiere que “Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal” y que esta
libertad personal “sólo podrá ser restringida en los límites señalados por la ley, para asegurar el
descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales”.
Entonces, la libertad de la persona es aquél derecho fundamental y constitucional que no sólo
debe ser respetado sino debe ser protegido por el Estado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 572


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por cierto, con el salvamento del art. 23, IV de la CPE, en el sentido que toda persona que sea
encontrada en delito flagrante, podrá ser aprehendida por cualquier otra persona, aun sin
mandamiento, con el único objeto de que sea conducido ante autoridad competente; de
conformidad parágrafo III del señalado art. “Nadie podrá ser detenido, aprehendido o privado de
su libertad, salvo en los casos y según las formas establecidas por la ley” y que “La ejecución
del mandamiento requerirá que éste emane de autoridad competente y que sea emitido por
escrito”.

En otro orden, el art. 15.I de la CPE, consagra que “Toda persona tiene derecho a la vida y a la
integridad física, psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos crueles, inhumanos,
degradantes o humillantes (…)”. Así, la Constitución, al tiempo de señalar en el art. 13.I, que los
derechos reconocidos por ella, entre otros caracteres, son inviolables, establece que el Estado
tiene el deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos.

III.1.2. De la acción de libertad.

La Constitución Política del Estado, en la Sección I, del Capítulo Segundo (Acciones de


Defensa) del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte
(Bases fundamentales del Estado - Derechos, deberes y Garantías) ha instituido la acción de
libertad. En ese marco, el art. 125 establece: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.
El art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, (LTCP), al referirse al objeto de la
acción de libertad, señala lo siguiente: “Es una acción constitucional extraordinaria de
tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión”.

La acción de libertad, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que la Ley


fundamental, del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección inmediata
tanto del derecho a la vida, así como en aquellas situaciones en las que el derecho a la libertad
física de las personas se encuentra lesionada por causa de una ilegal persecución, indebido
procesamiento o indebida privación de libertad. En este último caso, siempre que el
ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para reparar la lesión
producida; pues, de existir dicho medio, deberá hacerse uso de éste.

Desde otra perspectiva, para la consideración y resolución de la acción de libertad, debe tenerse
en cuenta que los ámbitos de protección se diferencian por el derecho que protegen: a) Derecho
a la vida; b) Derecho de locomoción, en tanto esté amenazado el derecho a la libertad personal;
c) Derecho al debido proceso, en cuanto esté restringido el derecho a la libertad personal; y, d)
derecho a la libertad personal, por haberse privado al margen de la Constitución y la Ley.

III.1.3. Sobre las formas de resolución de las acciones de libertad

La acción de libertad tiene por objeto determinar si la vida de una persona está en peligro y, en
cuanto a la libertad personal se refiere, si la persona está indebidamente privada de libertad o,
queda siendo ilegalmente perseguida o indebidamente procesada; en estos dos últimos casos,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 573


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cuando la persecución o procesamiento está vinculado a la restricción del derecho a la libertad


personal.

Según se presenten los hechos y se dilucide en el ámbito de protección cuya tutela se demanda,
así también, la resolución que emita el juez o tribunal llamado a conocer la acción de libertad,
determinará lo que corresponda. En este entendido, el art.125 de la CPE, nos señala la persona
que considere que su vida está en peligro, solicitará que se guarde tutela a su vida; la que crea
estar ilegalmente perseguida, que cese la persecución indebida o la que cree estar indebidamente
procesada o privada de libertad personal, se restablezcan las formalidades legales o se restituya
su derecho a la libertad. Dicho de otro modo, en la acción de libertad, al margen de los casos en
los que se tutela el derecho a la vida o de locomoción (por persecución ilegal en la que esté en
riesgo el derecho a la libertad física de la persona), el juez competente, o puede disponer la
restitución de la libertad, o mandar a que se restablezcan las formalidades, particularmente
cuando de las lesiones al debido proceso, en tanto éstas estén relacionadas con el derecho a la
libertad física de las personas.

III.2. Sobre el principio de celeridad y gratuidad en la administración de


justicia

El art. 178.I de CPE, establece que: “La potestad de impartir justicia emana del pueblo boliviano
y se sustenta en los principios de independencia, imparcialidad, seguridad jurídica, publicidad,
probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo jurídico…” (las negrillas son agregadas).

En concordancia con la citada norma constitucional, el art. 115.II de la citada Ley suprema del
ordenamiento jurídico nacional que determina: “El Estado garantiza el derecho al debido
proceso, a la defensa y a una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin
dilaciones” (las negrillas nos pertenecen). De la que se establece que la administración de
justicia debe ser rápida y eficaz tanto en la tramitación como en la resolución de las causas, ya
que las personas que intervienen en el proceso esperan una definición oportuna de su situación
jurídica, máxime si está comprometido un derecho fundamental de primer orden como es el de
la libertad.

La jurisprudencia constitucional al referirse al principio de celeridad y con relación a los


administradores de justicia, estableció que este principio: “…impone a quien administra justicia
el deber jurídico de despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones
indebidas; exigencia que se hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad
personal, toda vez que tales peticiones deben ser atendidas de forma inmediata si no existe una
norma que establezca un plazo, y si existiera, el plazo deberá ser cumplido estrictamente” así,
las SSCC 0758/2000-R, 1070/2001-R y 0105/2003-R entre otras.

En el orden normativo, el art. 3.7 de la Ley del Órgano Judicial (LOJ), determina que la
“celeridad comprende el ejercicio oportuno y sin dilaciones en la administración de justicia”.

Por otra parte, el principio de gratuidad, aludido en los arts. 115.II y 178.I de la CPE, es un
medio de acceso efectivo y gratuito a la justicia. Es decir, plantea que la justicia esté al alcance
de todos, sin que la situación económica de las partes pueda dar lugar a situaciones de privilegio
de unas respecto de otras, sabiendo que al administrado no le corresponde pagar ninguna suma
de dinero o retribución a los operadores de justicia. En ese orden la jurisprudencia constitucional
ha establecido que: “…La gratuidad es, en esencia, la condición para hacer realidad el acceso
a la justicia en condiciones de igualdad, pues la situación económica de las partes no puede
colocar a una de ellas en situación de privilegio frente a la otra ni propiciar, consiguientemente
la discriminación”. SC 0024/2005 de 11 de abril.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 574
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Cabe mencionar que la SC 0043/2006 de 31 de mayo, refirió con relación a la remuneración de


los operadores de justicia y a la gratuidad, que : "…es el Estado el que, al ser el encargado de
dirimir las controversias, se hace cargo de tal retribución; sin embargo, el Estado no está
obligado a correr con todos y cada uno de los gastos que derivan de la tramitación de un
proceso, de manera que el litigante debe cubrir lo que demande la compra de timbres, papeletas
o formularios valorados, fianzas de resultas, multas por incumplimientos, y portes de remisión
…". En la intención de materializar este principio contemplado en la Norma Fundamental, el art.
3.8 de la Ley LOJ, establece que: “El acceso a la administración de justicia es gratuita, sin costo
alguno para el pueblo boliviano, siendo esta la condición para hacer realidad el acceso a la
justicia en condiciones de igualdad…”; sin embargo, en el entendimiento de que dicha
efectivización del principio resulta de aplicación gradual y progresiva, la Ley 212, de 23 de
diciembre de 2011 en su art. 7. I, establece que “A partir del 3 de enero de 2012, se suprime y
elimina todo pago por concepto de timbres, en todo tipo y clase de proceso”, en tanto que en el
parágrafo II: “A partir del 3 de enero de 2013, se suprime y elimina todo pago por concepto de
formularios de notificaciones y papeletas de apelación, en todo tipo y clase de proceso”.

III.3. Sobre el recurso de apelación en medidas cautelares de carácter


personal

El art. 251 del CPP, dispone:

“La resolución que disponga, modifique o rechace las medidas cautelares, será apelable, en el
efecto no suspensivo, en el término de setenta y dos horas.
Interpuesto el recurso, las actuaciones pertinentes serán remitidas ante la Corte Superior de
Justicia, en el término de veinticuatro horas.

El Tribunal de apelación resolverá, sin más trámite y en audiencia, dentro de los tres días
siguientes de recibidas las actuaciones, sin recurso ulterior”.

Al respecto la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, al referirse al recurso de apelación para


impugnar resoluciones que imponen medidas cautelares de carácter personal, previsto en el art.
251 del CPP, señaló lo siguiente: “... El Código de procedimiento penal, dentro del sistema de
recursos que dispensa a las partes, prevé el de apelación contra las resoluciones que
dispongan, modifiquen o rechacen las medidas cautelares, que se muestra como un recurso
sumario, pronto y efectivo, dado que conforme lo establece el art. 251 del CPP, una vez
interpuesto este recurso, las actuaciones pertinentes deben ser remitidas ante la Corte
Superior de Justicia en el término de veinticuatro horas, debiendo el tribunal de apelación
resolver el recurso, sin más trámite y en audiencia dentro de los tres días siguientes de
recibidas las actuaciones” (las negrillas nos pertenece).

En efecto, al tratarse de la determinación de las medidas cautelares dentro de un proceso penal,


en el que la autoridad jurisdiccional debe sopesar, de forma reglada, sobre la determinación o no
de una detención preventiva, o en su caso, la aplicación de medidas sustitutivas de la detención
preventiva, y sea cual fuere la determinación al respecto, corresponde al Tribunal de alzada, tal
cual prevé el sistema procesal penal, pronunciarse sobre la sujeción o no de la determinación de
la medida cautelar a la norma. En ese sentido, dado que en el caso de las medidas cautelares, la
decisión debe ser tomada en la misma audiencia fijada al efecto y la interposición del recurso de
apelación contra dicha determinación pueda formularse en la misma, sumado a que los
antecedentes deben ser remitidos al Tribunal de alzada, que a su vez debe resolver en tres días,
en efecto, plantea una configuración procesal de resolución de la impugnación idónea para la
defensa dentro del proceso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 575


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso de examen, el accionante alude la presunta lesión al derecho al debido proceso y al


derecho a la libertad personal; o sea, desde otra perspectiva, el ámbito de la acción de libertad
formulada estriba en la presunta vulneración al derecho al debido proceso vinculado. Éste, de
manera directa, con la presunta conculcación de su derecho a la libertad personal, toda vez que -
según asevera el accionante- al haberse determinado su detención preventiva y en posterior
audiencia de cesación rechazada la misma, una vez interpuesta la apelación y concedida la
misma, tanto la autoridad accionada como el servidor público judicial, incurrieron en una
demora o dilación injustificada en el envió de los antecedentes al Tribunal de alzada al no
cumplir los plazos que señala la ley.

Como está señalado, el art. 251 del CPP, vigente por el art. 15 de la Ley del Sistema Nacional de
Seguridad Ciudadana (LSNSC), dispone que la resolución que disponga, modifique o rechace
las medidas cautelares será apelable en el efecto no suspensivo en el término de setenta y dos
horas, y que una vez formulado el recurso, las actuaciones pertinentes serán enviadas ante la
“Corte Superior de Justicia”, en el término de veinticuatro horas. El tribunal de apelación
resolverá, sin más trámite y en audiencia, dentro de los tres días siguientes de recibidas las
actuaciones, sin recurso ulterior.

La jurisprudencia constitucional considera como acto dilatorio cuando “…Interpuesto el recurso


de apelación contra la resolución que rechaza la solicitud de cesación de detención preventiva,
los antecedentes de la apelación no son remitidos por el juez a quo dentro del plazo legal de
veinticuatro horas establecido por el art. 251 del CPP -salvo justificación razonable y fundada
ante el tribunal de apelación, o se imprima un procedimiento o exigencias al margen de la ley”.
Así la SC 0384/2011-R que modula algunos casos que a manera de subreglas establece la SC
0078/2010-R.

Ahora bien, la SC 0146/2006-R de 6 de febrero, al referirse a la obligación del juez de remitir


los antecedentes al tribunal de alzada sostiene: “…se entiende que el apelante en su propio
interés, deberá proveer los recaudos correspondientes hasta antes del vencimiento de dicho
plazo; empero, la autoridad judicial de su parte, no podrá exigir, en cuanto a dichos recaudos,
más allá de lo que sea estrictamente necesario…”. Así pues, en ningún caso los operadores
pueden solicitar sumas de dinero por concepto de legalizaciones, transporte, refrigerio, etc.; no
obstante, como señala la aludida SC 1739/2011-R de 7 de noviembre, “…corresponde al
imputado proporcionar los recaudos de ley necesarios para remitir la apelación de la
Resolución que rechazó la solicitud de cesación a su detención preventiva y que la autoridad
jurisdiccional a cargo del proceso tiene la obligación de exigirlos…”. En ese sentido,
refiriéndose al Tribunal de alzada, la SC 0542/2010-R de 12 de julio, señala: “…una vez
interpuesto dentro del plazo legal el recurso de apelación incidental ante la autoridad
jurisdiccional que conoce la causa, y si el cuaderno de apelación no es remitido en el plazo
fijado por ley, dándoles una espera prudencial, para los casos de recargadas labores o
suplencias etc., debidamente justificadas; sin embargo, este plazo no puede exceder de tres
días; empero, si excede el plazo legal y la espera prudencial, el procedimiento se convierte en
dilatorio, y por ende el recurso de apelación deja de ser un medio idóneo y eficaz…”.

De la revisión de los documentos que informan los antecedentes de la presente acción, se


evidencia que la autoridad demandada pronunció la Resolución “13/2011” de 12 de enero de
2012, rechazando la solicitud de cesación de la detención preventiva presentada por el
accionante, y que éste apeló mediante su defensa de manera oral en dicha audiencia, dando lugar
a que la autoridad judicial ordene la remisión de actuados a la “Corte Superior del Distrito
Judicial de La Paz”, previa la notificación respectiva a las partes; ordenando a su vez, a Beymar
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 576
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Cartajena Catari, Secretario del Juzgado Segundo de Instrucción en lo Penal, el cumplimiento de


las normas procesales; no obstante, dichos antecedentes del proceso fueron remitidos ante el
Tribunal Departamental de Justicia de La Paz recién el 3 de febrero del año en curso a horas
16:00, es decir, veintidos días después de haberse resuelto la concesión de la apelación.

Si bien es el propio accionante el que recién el 17 de igual año, repone la papeleta de pago de
apelación, solicitando que se ordene la remisión de obrados ante la Corte Superior de Distrito, lo
cierto es que a la Jueza accionada, como titular del despacho, le correspondía velar por la
diligencia y celeridad que deben primar en las funciones del personal de su despacho, o como en
el caso de examen, de aquél personal del despacho en el que en suplencia ejerce su potestad, que
dicho sea de paso, evidentemente obró con displicencia, sin considerar que es su deber cumplir
con la orden judicial y hacer que la alzada se cumpla en los casos señalados por ley, mas aún
cuando en el caso concreto está de por medio la libertad del accionante.

El hecho es que la autoridad judicial demandada no cumplió con la obligación de respetar los
plazos establecidos por ley, teniendo en cuenta que los mismos son improrrogables y perentorios
conforme establece el art. 130 del CPP. Si bien, la jurisprudencia constitucional plantea la
posibilidad de alguna demora por causa justificada fundada y razonable; asimismo, refiere que
esta demora en ningún caso puede ser mayor a tres días. En consecuencia al haber transcurrido
al menos veintidós días desde la concesión de la apelación hasta la remisión de los antecedentes
ante el Tribunal de alzada, tanto la Jueza demandada, titular del despacho que actuó en
suplencia, como el funcionario del Juzgado donde radicó la causa, han dado lugar a que la
demora se constituya en un acto dilatorio contrario a los principios de celeridad y gratuidad
procesal consagrados por los arts. 178. I y 180.I de la CPE. Les impone a quienes administran
justicia el deber jurídico de despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones
indebidas; exigencia con carácter imperioso ante aquellos casos vinculados a la libertad, por
cuanto las peticiones efectuadas deben ser atendidas y cumplidas estrictamente.

III.5. Sobre algunos aspectos con relación a la provisión de recaudos y remisión de obrados
al Tribunal de alzada.

Si bien, los antecedentes fueron remitidos ante el Tribunal de alzada en la misma fecha en la que
se interpuso la presente acción, y según el Secretario Abogado accionado, los recaudos le fueron
provistos ese mismo día, tal afirmación contradice lo dicho por la parte accionante que afirma
que fue provisto el mismo día en que se le concedió la alzada; lo cierto es que no existe
evidencia de tales afirmaciones y resulta pertinente señalar, a manera de llamada de atención,
que el funcionario debe hacer constar, así sea en nota marginal, la fecha y hora, cantidad y
referencia específica de la provisión de recaudos, si así se hubiera obrado. Por otra parte, el
hecho que se hubiera cumplido con la remisión de antecedentes ante el Tribunal de alzada, no
impide que el juez o tribunal llamado a conocer y resolver la acción de libertad se pronuncie
sobre el fondo de la petición formulada.

Consecuentemente, se concluye que el Henry Sánchez Camacho, Juez Primero de Partido y de


Sentencia de El Alto del Distrito judicial de La Paz, al haber concedido la tutela sin libertad, ha
evaluado correctamente los datos del proceso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado, y el art. 12.7 de la LTCP, en
revisión, resuelve: APROBAR la Resolución de 6 de febrero de 2012, cursante de fs. 32 a 36

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 577


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pronunciado por el Juez Primero de Partido y Sentencia de El Alto del Distrito Judicial de La
Paz; y, en consecuencia, CONCEDER la tutela, sin disponer la libertad.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0094/2012


Sucre, 19 de abril 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00102-2012-01-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 05/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 689 a 693, pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional interpuesta por Gonzalo Antonio Zambrana Dorado
contra Modesto Palacios Cruz, Presidente; Luís Fernando Remontt Apahaza, Edmundo
Rivero Cors, Wilma Teodora Condori Chávez, Hugo Mamani Mamani, Vocales titular y
suplentes respectivamente; y, Marilin Gutiérrez Gironda, Secretaria General; todos
miembros del Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Previamente a desarrollar los antecedentes del presente caso, es menester aclarar que, por memorial de
14 de diciembre de 2011 (fs. 234 a 240 vta.), el demandante interpone acción de amparo constitucional
contra los miembros del Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz y contra los
miembros del Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, acción que fue rechazada in limine
por los Vocales de la Sala Civil Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, mediante la
Resolución 048/2011 de 22 de diciembre con el argumento de que el petitorio era impreciso, oscuro e
incompleto; asimismo, el 24 del mismo mes y año solicita desglose de la documentación arrimada junto
a la acción de amparo constitucional, pedido que es aceptado por la mencionada Sala, mediante
Resolución de 3 de enero de 2012. Por último, por el 20 del citado mes y año, vuelve a presentar acción
de amparo constitucional aclarando su petitorio y dirigiendo esta vez su acción sólo en contra de los
miembros del Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, disponiendo la Sala de turno por
Resolución de 20 de enero de 2012, que tratándose de una acción constitucional en la cual existe
identidad de sujeto, objeto y causa, se remita la presente acción nuevamente ante la Sala Civil Tercera
del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

De lo que se tiene que, el accionante mediante memorial de fs. 234 a 240 vta., corregido a fs. 453 a
459, asevera lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 578


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante afirma que es capitán de la Policía Boliviana, con funciones de Jefe de Seguridad de
la Estación Policial Integral Cotahuma de la ciudad de La Paz; y que, el 30 de abril de 2011 en
horas de la mañana, es detenido por un vehículo policial, endilgándole un supuesto escándalo en
vía pública vistiendo uniforme policial. En ese ínterin, el Teniente Coronel Manuel Coritza Zuñiga,
emite informe de acción directa, en base al cual se dicta Auto de inicio de procesamiento de 18 de
agosto de 2011, que dispone el inicio del juzgamiento en su contra, por la supuesta infracción al
art. 12.20 de la Ley del Régimen Disciplinario de la Policía Boliviana (LRDPB), que a la letra
dice: “Circular en vía pública vistiendo uniforme en estado de ebriedad” (sic), iniciando una férrea
defensa, en sentido de no haber incurrido en falta alguna, por no haber estado vistiendo uniforme
policial el día de los hechos. Manifiesta que todas las actas, informes y fotografías de lo sucedido,
establecen que su persona se encontraba vistiendo una chompa color azul a rayas, que no
representa uniforme policial, y que ninguna de las autoridades -se entiende que resolvieron el caso-
hizo mención razonable al respecto.

Indica que, después de desarrollado el juicio oral, el Tribunal Disciplinario Departamental


Permanente de La Paz, dictó la Resolución 035/11 de 29 de agosto de 2011, que resuelve su retiro
temporal por un año de la institución policial, con pérdida de su antigüedad y sin goce de haberes, por
la supuesta comisión de la falta disciplinaria prevista por el art. 12.20 de la LRDPB; acusando a esta
Resolución, de lesionar sus derechos constitucionales al debido proceso y a la defensa, por no
expresar consideración ni positiva ni negativa sobre el atuendo de lana, consistente en una chompa de
color azul, que cubría gran parte de su cuerpo el día del incidente, y que asegura, no representa a la
Policía Boliviana.

Contra dicha Resolución, el accionante en fecha 23 de septiembre de 2011, interpone recurso de


apelación, basando su argumentación en la estructura del uniforme policial, en el sentido de que la
chompa de color azul del día de los hechos, altera en su totalidad la estructura del uniforme
policial, resultando que la polera negra, pantalón verde y botas -además de la ya sabida chompa
azul-, constituyen un conjunto que no está clasificado como uniforme policial, haciendo inaplicable
la normativa disciplinaria en cuestión.

El Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, mediante Resolución 058/2011 de 4 de


noviembre que resuelve la apelación, sólo se manifestó en el sentido de que, el procesado estaba
vistiendo prendas policiales, como ser pantalón de uniforme 1, botas de combate, característicos de
la Policía Boliviana, constituyendo para el accionante este hecho, nuevamente como una agresión a
su derecho a la defensa y al debido proceso, por considerar que es requisito de toda resolución, sea
ésta administrativa o judicial, absolver todos y cada uno de los puntos planteados como defensa por
el justiciable; en este caso, el argumento del atuendo de lana redundantemente expuesto en su
memorial de fs. 234 a 240 vta. añade que, en casi diez documentos cursantes en el expediente
investigativo, se pronuncian sobre su vestimenta, y especialmente sobre la chompa oscura o azul,
siendo los únicos que omiten hacerlo las autoridades ahora demandadas, pese a ser parte de su
argumento de defensa, concluyéndose con el rechazo de la mencionada apelación; denunciando no
sólo la inexistencia de pronunciamiento intelectivo, valorativo o explicativo sobre una prenda de
vestir, por parte de las autoridades accionadas, sino de la falta de “exhaustividad de la explicación”.

Señala la severa contradicción en las fechas de lo sucedido, pero las autoridades demandadas solo
responden que se tiene establecida la fecha de la comisión de la falta; asimismo hizo referencia a
que no existió requerimiento fiscal para la prueba del alcosensor, manifestando los demandados
que el fiscal estuvo presente -se entiende en dicho actuado-; finalmente declaro que las diligencias
de notificación no cumplieron su objetivo, porque no tuvo conocimiento oportuno del proceso, a lo
que las autoridades demandadas se pronunciaron indicando que fue notificado conforme al art. 54
de la LRDPB. Observaciones efectuadas en su escrito de apelación, que fueron omitidas por
quienes debían resolver dicho recurso, siendo su respuesta general e imprecisa, concluyendo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 579
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

entonces en la existencia de dos concretas agresiones a sus derechos constitucionales, la primera en


virtud a la no existencia de fundamento satisfactorio sobre parte de la vestimenta que lo cubría el
día del suceso sometido a juicio, y la segunda, respecto a la inexistencia de fundamento
satisfactorio sobre los puntos expuestos como agravios en su escrito de apelación.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

El accionante mediante su memorial de fs. 234 a 240 vta., corregido por el memorial de fs. 453 a
459, alega la vulneración al Debido Proceso “en su vertiente de correcta fundamentación de las
resoluciones”, sin mencionar el artículo de la Constitución que contiene a este instituto jurídico;
asimismo, acusa infracción a su Derecho a la Defensa, prescrito por el art. 115 de la Constitución
Política del Estado (CPE), sin tampoco precisar en que parágrafo se encuentra.

I.1.3. Petitorio

Solicita, se conceda la tutela y se declare la nulidad de la Resolución 058/2011 de 4 de noviembre


dictada por el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, ordenándose a su vez que se
emita nueva resolución que exponga fundada y satisfactoriamente, el argumento de su vestimenta
el día del suceso, y absuelva todos y cada uno de los puntos expuestos como agravios en su
apelación.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 10 de febrero de 2012, según consta en el acta de fs. 685 a 688
vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante, ratificó los extremos de su demanda, además de puntualizar su petitorio de
una mejor explicación de las decisiones adoptadas por el Tribunal demandado, e insistir en la omisión
en que incurrieron éstos, así como el tribunal de primer grado, en pronunciarse respecto de los
siguientes aspectos: 1) La chompa azul que usaba el día de los hechos, añadiendo que por esta
circunstancia existiría “falta de tipicidad del hecho con respecto a la norma”; 2) El reclamo, también
efectuado en su recurso de apelación, respecto de la contradicción en la fecha que ocurrió el hecho,
siendo que por la investigación efectuada por la Dirección General de Investigación Policial Interna,
se establece el 31 de abril -del 2011-, que revisando el calendario nunca existió; 3) La inexistencia de
un requerimiento fiscal para la prueba del alcosensor; y, 4) Indica que “no ha habido una adecuada
notificación con el inicio y el conocimiento oportuno del proceso disciplinario” (sic.).

Considerándose como lesionados los derechos al debido proceso en su “vertiente de la


fundamentación correcta de las resoluciones” y a la defensa de su defendido.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El abogado de la parte demandada sostuvo que el 30 de abril de 2011, aproximadamente a horas


9:00, Radio Patrullas 110 recibió una llamada de unos vecinos de la zona Villa Copacabana de la
ciudad de La Paz, denunciando que una persona vistiendo prendas policiales, estaba agrediéndose
con otra persona; es por ello que el Subcomandante de la Unidad de Radio Patrullas 110, Manuel
Coritza Zuñiga se constituye en el lugar, advirtiendo que una de las personas que estaba en la
confrontación se dio a la fuga y la otra se quedó en el lugar, logrando identificar a éste último
como Gonzalo Zambrana Dorado funcionario policial, quien fue conducido por su seguridad a la
Dirección General de Investigación Policial Interna de la misma ciudad; en el trayecto, dicho
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 580
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

oficial en visible estado de ebriedad, agredió verbalmente al Subcomandante de Radio Patrullas


110 y amenazó al chofer del vehículo patrullero. En esta dependencia, al percatarse que el oficial
de policía se encontraba en estado de ebriedad, fue trasladado a la Unidad Operativa de Tránsito
para realizarle la prueba del alcotest, logrando aprovechar un descuido de sus custodios para
intentar darse a la fuga por la calle Cochabamba, siendo detenido en su intento por el mismo
personal. Nuevamente detenido, se rehusó a practicarse la prueba de alcotest y en resguardo de sus
derechos y garantías fue trasladado al Batallón de Seguridad Física ubicado en la zona de
Sopocachi de la ciudad de La Paz, en donde en presencia del Subcomandante de su unidad, le
hicieron conocer que había cometido faltas graves previstas en la Ley de Régimen Disciplinario de
la Policía Boliviana, y por lo tanto se encontraba a disposición investigativa, teniendo que
presentarse el siguiente lunes del mismo mes a prestar su declaración informativa.

Indicó que, los funcionarios policiales dejaron al capitán Zambrana a las diez de la mañana en el
Batallón de Seguridad Física; sin embargo éste a las 12:10 del mismo día, aprovechando un
descuido del personal, nuevamente procede a salir de su unidad con rumbo desconocido.
Después de hacer el resumen de lo ocurrido, el abogado de las autoridades demandadas manifestó
los siguientes extremos: a) El ahora accionante nunca se presentó a prestar su declaración
informativa ante la Dirección General de Investigación Policial Interna, por lo que fue notificado
mediante cedulón, de acuerdo a lo establecido por el art. 54 de la LRDPB; b) El Fiscal Policial en
conocimiento del caso, emite requerimiento de acusación, en base a los informes y pruebas
recolectados en la etapa investigativa, con el cual es legalmente notificado; c) Radicada la causa
ante el Tribunal Disciplinario Departamental de La Paz, es el mismo capitán Zambrana quien se
apersona, mediante un memorial impugnando el requerimiento acusatorio del Fiscal Policial,
solicitando a su vez se devuelva el caso a la Dirección General de Investigación Policial Interna,
siendo que la impugnación planteada, no se encuentra prevista en la Ley del Régimen Disciplinario
de la Policía Boliviana; d) El Tribunal Disciplinario Departamental de La Paz, conforme establece
el art. 74 de la norma anteriormente citada, emite el Auto de inicio de procesamiento, donde se
llega a establecer que el capitán Zambrana infringió las previsiones del art. 12.20 de dicha norma;
e) En el proceso disciplinario el acusado tuvo la defensa de su abogado y la posibilidad de
presentar sus pruebas, de la misma forma la Fiscalía Policial, con lo que el mencionado Tribunal
emite la Resolución Administrativa (RA) 035/2011 de 29 de agosto, de acuerdo a lo dispuesto por
el art. 91 de la LRDPB; y, f) Existe un considerando en la Resolución de primer grado que expresa
que, en las unidades policiales operativas y en los institutos de formación académica, se utiliza el
uniforme que consta de pantalón verde olivo, botas negras de combate y la polera sea negra o
blanca para realizar actividades físicas o deportivas, y al ser un oficial de la Policía Boliviana, que
ha sido formado cuatro años en la Academia Nacional de Policías, además de tener quince años de
trabajo en la institución, conoce perfectamente cuales son los uniformes; y en el caso es el
uniforme 1, consistente en el pantalón, botas de combate y polera negra, el que se utiliza para
acondicionamiento físico, infiriéndose que el 30 de abril -de 2011- el oficial se encontraba
vistiendo uniforme de acondicionamiento físico.

En grado de apelación, el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana conoce la causa,


emitiéndose en consecuencia la Resolución 058/2011, conforme establece el art. 99 de la LRDPB,
donde consta el considerando que responde a cada uno de los puntos del peticionante en su
apelación, refiriendo que: i) El caso fue aperturado de oficio, de conformidad al art. 64 de la
LRDPB y no a denuncia como manifestó el peticionante; ii) La prueba del alcosensor, fue
realizada en presencia del fiscal policial y del investigador asignado al caso, y no así sin la
presencia de ninguna autoridad como también manifestó el mismo; iii) El Tribunal Disciplinario
Superior estableció que el procesado no se hizo presente en la Dirección General de Investigación
Policial Interna para asumir su defensa, siendo citado en aplicación del art. 54 de la LRDPB, y no
como menciona el ahora accionante, que en Dirección General de Investigación Policial Interna no
le habrían notificado legalmente, por lo que no se habría vulnerado el debido proceso; iv) En
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 581
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cuanto a la fecha del hecho, consta de manera clara en el formulario respectivo, la fecha en que fue
cometida la falta; v) El procesado se encontraba vistiendo “chompa negra”, polera negra, pantalón
verde de uniforme y botas de combate, es decir, si se encontraba vistiendo prendas policiales en vía
pública y en estado de ebriedad; vi) Respecto de la boleta de pago del mes de agosto a que se hace
referencia en la apelación, no guarda relación con el presente caso, correspondiendo a otro proceso
disciplinario; y, vii) El procesado vestía pantalón de uniforme 1 y botas de combate, que son
características principales de la Policía Boliviana en su color verde olivo, forma y modelo, toda vez
que así está descrito en el Reglamento de Uniformes de la Policía Boliviana, aprobado mediante
Resolución Administrativa 0334/10 de 9 de abril de 2010, y no así como sostiene el ahora
accionante que no estaba vestido de uniforme. Por lo que, señala se ha dado respuesta a la
apelación interpuesta, llevándose acabo el proceso disciplinario conforme la Ley del Régimen
Disciplinario de la Policía Boliviana, con lo que no se ha vulnerado el debido proceso, ni el
derecho a la defensa del ahora accionante, solicitando denegar el presente “recurso”.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituida en Tribunal de
garantías, mediante Resolución 05/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 689 a 693, denegó la
tutela solicitada bajo los siguientes argumentos: 1) La Resolución 058/2011, en su ratio decidendi
se pronuncia sobre todos los aspectos apelados y cuestionados; b) Asimismo, en sus puntos 5), 6) y
7) hace referencia a la chompa negra, polera negra, pantalón verde de uniforme y botas de
combate, por lo que sí se encontraba vistiendo prendas policiales; c) Con referencia a la prueba del
alcosensor y la presencia del Fiscal Policial y el investigador asignado, así como las diligencias de
notificación, son especificados, analizados y fundamentados en los puntos 1), 2), 3), 4), 8) y 9) del
considerando valorativo y del fundamento legal; d) La motivación de la resolución 058/2011 es
concisa, clara y satisfactoria a los puntos apelados, expresa convicciones determinativas que
justifican razonablemente la decisión pronunciada, no lesionando el debido proceso y menos el
derecho a la defensa; y, e) Las Resoluciones 053/11 y 058/2011, han sido pronunciadas en
previsión de los arts. 91 y 99 de LRDPB, entendiéndose como finalidad de esta norma, precisada
por su art. 2, la de precautelar, proteger y resguardar la ética, disciplina, servicio público policial, y
los intereses e imagen institucional de la policía Boliviana.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Según consta en el formulario de apertura de caso, cursante a fs. 246, el 30 de abril de 2011 a
horas 9:30 aproximadamente, se hizo presente en la Dirección Departamental de Investigación
Interna Policial, Manuel Coritza Zuñiga, Subcomandante de Radio Patrullas 110 de la ciudad de La
Paz, remitiendo y conduciendo a un oficial de la Policía Boliviana, mismo que es identificado
como Gonzalo Antonio Zambrana Dorado, quien vistiendo uniforme y en presumible estado de
ebriedad, con aliento alcohólico, habría observado un comportamiento escandaloso en plena vía
pública, entre las calles Winner y Velasco, cerca del Hospital San Gabriel, zona Villa Copacabana
de la ciudad de La Paz; asimismo al ser conducido en la patrulla, el mencionado oficial de policía
habría faltado al respeto y vertido amenazas en contra de los funcionarios policiales que lo
custodiaban. Antecedente refrendado por el informe de acción directa, cursante a fs. 247 y vta.,
firmado por el oficial policial superior interviniente, además del investigador asignado al caso.

II.2. Cursa en el expediente a fs. 248, el acta de prueba de campo para detección de alcohol,
realizado el 30 de abril de 2011 a horas 10:15 por personal del Organismo Operativo de Tránsito
de la ciudad de La Paz, en presencia del investigador y el Fiscal Policial, donde resulta que el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 582
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

servidor público policial Gonzalo Antonio Zambrana Dorado, no dio su consentimiento para dicho
examen, por estar presumiblemente bajo influencia alcohólica, siendo que mostraba falta de
coordinación motora, dificultad en la articulación de palabras y halitosis alcohólica,
especificándose en dicha acta que el oficial renuente vestía pantalón de uniforme 1 y botas de
combate.

II.3. El Fiscal Policial, mediante requerimiento de fs. 249, en aplicación de lo dispuesto por el art.
42.1 de la LRDPB, requiere el inicio de investigaciones, por supuestas transgresiones al art. 12.20
de la misma norma y la consiguiente notificación de las partes, ante la inconcurrencia del
investigado a comparecer ante el Fiscal Policial, habiéndose negado a recibir y firmar el acta de
entrega de requerimiento de inicio de investigaciones y el acta de citación (fs. 266, 267 y 268), es
que en previsión del art. 54 de la citada ley, se dispone su citación mediante cédula (fs. 270, 271,
272 y 273), por el que tampoco comparece ante la autoridad requirente.

II.4. Concluyendo la autoridad fiscal que, en virtud de las pruebas colectadas en la etapa
investigativa, el Fiscal Policial emite Requerimiento de Acusación cursante de fs. 282 a 283,
solicitando al Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz señale día y hora de
audiencia oral, pública, contradictoria y continúa; requerimiento que es impugnado por el acusado
ante este Tribunal, mediante memorial de 10 de mayo de 2011, cursante de fs. 287 a 288 vta., por
el que solicita se devuelvan obrados a la Dirección Departamental de Investigación Policial
Interna, por existir errores según el acusado insubsanables, sin embargo dicha impugnación no
ameritó mayor consideración por el Tribunal policial de primer grado.

II.5. El Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz, mediante Resolución de 18


de agosto, dicta Auto de Inicio de Procesamiento, programando audiencia de proceso oral y
contradictorio para el 26 de agosto de 2011, a horas 8:00, modificándose esta fecha mediante
Resolución de 26 de agosto del mismo año, señalándose nuevo día de audiencia para el 29 del
citado mes y año, a horas 9:30 por razones de excesiva carga procesal.

II.6. Instalada la audiencia de proceso oral público en la fecha indicada, y ante la ausencia del
abogado defensor del procesado, el Tribunal tuvo que nombrarle uno de oficio; siendo la prueba
testifical de cargo la primera en producirse, con las atestaciones de los siguientes funcionarios:
Teniente Coronel Manuel Coritza Zuñiga, Capitán Einar Ayala Winkelmann, Teniente Álvaro Lea
Plaza y Teniente Reynaldo Rodrigo Aguilar Solares, quienes corroboraron las circunstancias
alegadas por el Fiscal Policial, concluyendo las atestaciones de cargo con el contrainterrogatorio
formulado por la defensa, misma que a su turno, no presentó prueba testifical, por lo cual, el
Tribunal dispuso la presentación de prueba documental.

II.7. El Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz, en virtud de todo lo visto y oído
en la audiencia de proceso disciplinario oral, público, continuo y contradictorio, emite la Resolución
Administrativa 035/11 de 29 de agosto de 2011, cursante de fs. 342 a 346 vta., considerando que las
pruebas testificales y literales introducidas por el Fiscal Policial son creíbles, especialmente,
consideran contundente la acción directa y atestación realizada por un Jefe Policial -se infiere la
participación del Teniente Coronel Manuel Coritza Zuñiga-, para llegar a la conclusión de que el
Capitán Gonzalo Antonio Zambrana Dorado, ha circulado en vía pública en estado de ebriedad,
vistiendo uniforme policial (pantalón verde olivo de combate, botas negras de combate y polera
negra), por lo que dicta la Resolución Sancionatoria, en virtud al art. 93 de la LRDPB, con el retiro
temporal de un año de la institución policial con pérdida de antigüedad y sin goce de haberes, por la
comisión de la falta disciplinaria prevista en el art. 12.20 del mismo cuerpo legal.

II.8. Mediante memorial de 23 de septiembre de 2011, cursante de fs. 348 a 352, el demandante
interpone recurso de apelación contra la mencionada RA 035/11, alegando violación al debido
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 583
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

proceso contenido en los arts. 115 de la CPE, 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos y 8 del Pacto de San José de Costa Rica, mencionando además indefensión absoluta.

II.9. En conocimiento del caso, el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, en virtud
al art. 98 de la LRDPB emite la RA 058/2011 de 4 de noviembre, cursante de fs. 362 a 368, por la
cual declara improbada la apelación presentada, confirmando la RA 035/11, que sanciona al
Capitán Gonzalo Antonio Zambrana Dorado, estableciendo que: 1) El caso fue aperturado de
oficio, de conformidad al art. 64.1 de la LRDPB, no existiendo por tanto denunciante; 2) La prueba
del alcosensor fue realizada con la presencia del Fiscal Policial y el Investigador asignado al caso;
3) El ahora demandante no se hizo presente para asumir defensa en la Dirección General de
Investigación Policial Interna, por lo que se procedió a su legal citación en conformidad a lo
prescrito por el art. 54 de la citada Ley; 4) De acuerdo al formulario de apertura de caso, se tiene
claramente establecida la fecha de la comisión de la falta; 5) El procesado se encontraba vistiendo
“chompa negra”, polera negra, pantalón verde de uniforme y botas de combate, por lo que, sí se
encontraba con prendas policiales en vía pública y en estado de ebriedad; 6) El pantalón de
uniforme 1 y las botas de combate, son características principales de la Policía Boliviana en su
color verde olivo, forma y modelo; y, 7) En la etapa investigativa y en el Tribunal Disciplinario
Departamental, se ha dado estricto cumplimiento a la Ley del Régimen Disciplinario de la Policía
Boliviana, no advirtiéndose por lo mismo violación al debido proceso, ni indefensión.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante acusa vulneración de su derecho al debido proceso y a su derecho a la defensa,


citando el art. 115 de la CPE, alegando que no existiría fundamento satisfactorio sobre: a) Parte de
la vestimenta que usaba el día del suceso sometido a juicio; y, b) Los puntos expuestos como
agravios en su escrito de apelación.

Concerniendo a este Tribunal, considerar si en el presente caso corresponde o no la tutela


impetrada.

III.1. Exordio a la responsabilidad disciplinaria de los miembros de la Policía Boliviana

En el orden constitucional vigente, se regula a la Policía Boliviana dentro del marco de lo prescrito
por el art. 251.I de la CPE, que señala: “La Policía Boliviana, como fuerza pública, tiene la misión
específica de la defensa de la sociedad y la conservación del orden público, y el cumplimiento de
las leyes en todo el territorio boliviano. Ejercerá la función policial de manera integral, indivisible
y bajo mando único, en conformidad con la Ley Orgánica de la Policía Boliviana y las demás leyes
del Estado”.

Con relación a su misión y finalidad, el art. 6 de la Ley Orgánica de la Policía Nacional (LOPN),
establece que: “La Policía Nacional tiene por misión fundamental, conservar el orden público, la
defensa de la sociedad y la garantía del cumplimiento de las leyes, con la finalidad de hacer posible
que los habitantes y la sociedad se desarrollen a plenitud, en un clima de paz y tranquilidad”.

Por último, el art. 3 de la LRDPB, acoge diversos principios rectores de la función pública policial
adecuados a la misión y finalidad constitucional referida, entre ellos, tenemos a: La ética, como la
cualidad moral del funcionario policial que condiciona su comportamiento a la práctica de valores
humanos y sociales; la disciplina, principio que compele al funcionario policial en el marco de las
leyes y sus reglamentos, además de su estructura institucional, a que cumpla con las reglas de
orden jerárquico y de subordinación; responsabilidad, por el que el funcionario policial, debe
responder por los actos realizados en el ejercicio de sus funciones o en el cumplimiento del deber.
Estos Principios, son de cumplimiento obligatorio por los miembros de la entidad policial, más
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 584
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

aún, si se tiene en cuenta que, el perfil policial diseñado por nuestro ordenamiento jurídico,
promueve a que el funcionario policial deba ser una persona íntegra, que ejercite y defienda los
valores democráticos y en general constitucionales, sometida a la disciplina, a la jerarquía y al
orden de la institución, con la suficiencia moral y profesional para generar en la sociedad confianza
y respeto a tiempo de cumplir con su misión fundamental establecida por la Constitución Política
del Estado, cual es, la defensa de la sociedad y el cumplimiento de las leyes; concluyéndose que,
ante la eventual inconducta de algún funcionario policial, éste puede ser sometido a un proceso
disciplinario, y si es hallado responsable de alguna falta, ameritará una sanción, conforme prevén
las normas especializadas de la entidad policial.

III.2. El debido proceso en procesos administrativos disciplinarios

El debido proceso, ha sido concebido por nuestra Norma Fundamental en sus arts. 115.II y 117.I,
“…como un principio, un derecho y una garantía, es decir, la naturaleza del debido proceso está
reconocida por la misma Constitución en su triple dimensión: como derecho fundamental de los
justiciables, un principio procesal y una garantía de la administración de justicia…”, (SC
0473/2011-R de 18 de abril); teleológicamente, el valor Justicia, es la máxima aspiración que
pretende lograr este instituto jurídico, cuando es aplicado en los distintos procedimientos previstos
en nuestra legislación, en ese sentido se pronuncia la SC 0999/2003-R de 16 de julio, que refiere:
“La importancia del debido proceso esta ligada a la búsqueda del orden justo. No es solamente
poner en movimiento mecánico las reglas de procedimiento sino buscar un proceso justo, para lo
cual hay que respetar los principios procesales de publicidad, inmediatez, libre apreciación de la
prueba; los derechos fundamentales como el derecho a la defensa, a la igualdad, etc. ...”.

La doctrina jurisprudencial, conforme con el marco constitucional desarrollado, ha establecido que,


los elementos que integran al debido proceso son: El derecho a un proceso público, el derecho al
juez natural, el derecho a la igualdad procesal de las partes, el derecho a no declarar contra si
mismo, la garantía de presunción de inocencia, el derecho a la comunicación previa de la
acusación, el derecho a la defensa material y técnica, la concesión al inculpado del tiempo y los
medios para su defensa, el derecho a ser juzgado sin dilaciones indebidas, el derecho a la
congruencia entre acusación y condena, la garantía del non bis in idem, el derecho a la valoración
razonable de la prueba, derecho a la motivación y congruencia de las decisiones (SSCC
0082/2001-R, 0157/2001-R, 0798/2001-R, 0925/2001-R, 1028/2001-R, 1009/2003-R, 1797/2003-
R, 0101/2004-R, 0663/2004-R, 022/2006-R, entre otras), elementos que por el principio de
progresividad no tienen un carácter limitativo, sino enunciativo y que son aplicables a las distintas
instancias administrativas sancionatorias, como la de la Policía Boliviana.

Es decir, los procesos disciplinarios administrativos, y específicamente aquellos realizados al


interior de la Policía Boliviana, no están exentos de la aplicación del debido proceso, así el
Tribunal Constitucional, mediante la SC 2692/2010-R de 6 de diciembre, señaló: “…al interior de
los procesos administrativos entre los cuales se encuentran los procesos disciplinarios, es exigible
el respeto al derecho al debido proceso, y como consecuencia de ello, la exigencia del respeto de
cada uno de sus presupuestos constitutivos o configurativos entre los cuales se encuentra la
exigencia de que toda resolución que emane de este ámbito se encuentre debidamente
fundamentada y motivada”; congruente con lo prescrito por el art. 8.1 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos (CADH), que instituye: “Toda persona tiene derecho a ser
oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente,
independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier
acusación penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de
orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter”, con lo que corresponde analizar las
connotaciones jurídicas en el presente caso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 585


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.3. Análisis del caso

La denuncia del demandante, se resume en el reiterativo cuestionamiento que hace, respecto a que
no se hubiera considerado en las resoluciones de grado, parte de su vestimenta del día del hecho y
que tampoco habrían sido absueltos los puntos de su apelación, resumidos en los siguientes: i)
Duda en cuanto a la intervención de los testigos de cargo en sus declaraciones; ii) Inexistencia de
requerimiento fiscal para la prueba del alcotest; iii) Falta de citación con el requerimiento de inicio
de investigaciones; iv) Indeterminación de la fecha en que ocurrió el hecho; v) Contradicción en
cuanto a la forma del inicio de las investigaciones (a denuncia o de oficio), vi) Falta de tipicidad
del hecho atribuido, por cuanto la vestimenta del procesado el día de los hechos, no está
contemplada como uniforme policial en la Resolución Suprema 225497 de 5 de septiembre de
2008, tampoco dentro de la Resolución Administrativa 0334/10 de 9 de abril de 2010; vii) Omisión
de valorar la prueba documental de descargo consistente en el memorándum 0355/11, por parte del
Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz; y, viii) La imposición anticipada de
la sanción, sin antes ejecutoriarse la Resolución de grado, cuando en su papeleta de pago advirtió
que no tenía líquido pagable.

III.3.1. En cuanto a la denuncia de falta de fundamentación respecto de la prenda de vestir,


supuestamente no valorada

En principio, se debe entender de que, definir la composición y uso de los uniformes de las unidades
castrenses y policiales, es competencia de sus propios estamentos y no del Tribunal Constitucional
Plurinacional; tampoco éste Tribunal puede pronunciarse respecto a reglamentos propios de las
instituciones a menos que en su contenido o desarrollo contradigan a los principios y valores contenidos
en la Constitución Política del Estado y ello sea acreditado.

Sin entrar en discusión del fondo de este acápite, es imperioso también entender que, la
jurisdicción constitucional, no puede interferir en la labor interpretativa y valorativa de los órganos
que administran justicia, sean estos ordinarios o especializados como en el presente caso, a no ser,
que se hayan afectado o vulnerado derechos o garantías constitucionales; este es el criterio del
Tribunal Constitucional, que en la SC 1390/2011-R de 30 de septiembre, refiere: “La Jurisprudencia
Constitucional, además de establecer los límites para la procedencia de la acción de amparo contra
decisiones judiciales, construyó la doctrina de las auto restricciones (self restraint), para la jurisdicción
constitucional, con el objeto de delimitar los ámbitos entre ésta y la jurisdicción ordinaria; en ese
marco, una de ellas es precisamente la no interpretación de la legalidad ordinaria; al respecto, la SC
1846/2004-R de 30 de noviembre, señaló: 'Si bien la interpretación de la legalidad ordinaria debe ser
labor de la jurisdicción común, corresponde a la justicia constitucional verificar si en esa labor
interpretativa no se han quebrantado los principios constitucionales informadores del ordenamiento
jurídico, entre ellos, los de legalidad, seguridad jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía
normativa y debido proceso; principios a los que se hallan vinculados todos los operadores jurídicos de
la nación; dado que compete a la jurisdicción constitucional otorgar la protección requerida, a través
de las acciones de tutela establecidas en los arts. 18 y 19 de la Constitución, ante violaciones a los
derechos y garantías constitucionales, ocasionadas por una interpretación que tenga su origen en la
jurisdicción ordinaria, que vulnere principios y valores constitucionales…'”; en virtud de la misma auto
restricción, tampoco es posible que la jurisdicción constitucional ingrese en la revisión de la valoración
de la prueba efectuada por los tribunales de grado, siendo que para este extremo, el demandante debió
fundamentar en su acción la concurrencia de los siguientes requisitos: “…1) Que la valoración se aparte
de los marcos legales de razonabilidad y equidad (SC 0873/2004-R y 0106/2005-R, entre otras); o 2)
Cuando la Resolución que determine una sanción haya omitido arbitrariamente valorar la prueba y su
lógica consecuencia sea la lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales…” (SC
2764/2010-R de 10 de diciembre); por último, la jurisdicción constitucional no constituye última

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 586


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

instancia, para volver a revisar las decisiones de los órganos de administración de justicia ordinaria, ni
especializada, como en el presente caso.

De un análisis de la RA 035/2011 (fs. 342 a 346), se advierte que hace expresa mención a la forma de
vestir del uniforme policial del demandante el día del hecho, inclusive absolviendo el cuestionamiento
de la defensa, de que no era uniforme por existir una chompa azul de lana que usaba el procesado
encima de su atuendo policial, uniforme policial del demandante que en sus componentes pantalón
verde olivo, botas negras de combate y polera -negra en este caso- son los que utilizan las unidades
policiales operativas y los institutos de formación académica, para realizar actividades físicas y/o
deportivas. De la misma manera, la RA 058/2011 (fs. 362 a 368), que resuelve la impugnación a la
RA 035/11 se pronuncia respecto de las prendas que llevaba el ahora demandante en fecha 30 de
abril de 2011, y establece que si se encontraba vistiendo prendas policiales, en vía pública y en
estado de ebriedad; fundamentación y valoración que para el Tribunal Constitucional Plurinacional
son puntuales pero razonables.

Por otra parte, si el accionante pretendía un expreso pronunciamiento de este Tribunal, respecto a la
labor interpretativa y valorativa de los tribunales de grado respecto de la naturaleza de cuestionadas
prendas de vestir, no se ha explicado por qué esta labor resulta insuficientemente motivada, arbitraria,
incongruente, absurda, ilógica o con error evidente, identificando en su caso los requisitos para que el
Tribunal Constitucional Plurinacional efectúe la revisión de la interpretación de legalidad ordinaria, es
decir, los mencionados por la SC 0718/2005-R de 28 de junio, a saber: “…exprese de manera
adecuada y precisa los fundamentos jurídicos que sustenten su posición, fundamentos en los que
deberá exponer con claridad y precisión los principios o criterios interpretativos que no fueron
cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y consiguiente
aplicación de la norma interpretada; asimismo, exponer qué principios fundamentales o valores
supremos no fueron tomados en cuenta o fueron desconocidos por el intérprete al momento de
desarrollar la labor interpretativa y asumir la decisión impugnada…”; asimismo si bien se ha hecho
mención a los derechos supuestamente lesionados por el intérprete, sin embargo, el demandante no ha
estableciendo el nexo de causalidad entre éstos y la interpretación impugnada; por último, no ha
precisado las reglas de interpretación inaplicadas por los intérpretes a momento de resolver el caso
(SC 2274/2010-R de 19 de noviembre), considerando en consecuencia este Tribunal, inviable
pronunciarse sobre la pretensión del demandante.

III.3.2. En cuanto a la omisión de fundamentos con relación a los agravios expuestos en el


recurso de apelación

En lo referente a esta denuncia, corresponde precisar que el Tribunal Disciplinario Superior de la


Policía Boliviana, mediante la RA 058/2011, y el considerando que hace referencia a la valoración
y fundamentación legal del recurso de apelación (fs. 367), resuelve el recurso planteado en la
forma prevista por el art. 99 de la LRDPB, así la SC 1365/2005-R de 31 de octubre, refiere:
“…cabe señalar que la motivación no implicará la exposición ampulosa de consideraciones y
citas legales, sino que exige una estructura de forma y de fondo. En cuanto a esta segunda, la
motivación puede ser concisa, pero clara y satisfacer todos los puntos demandados, debiendo
expresar el Juez sus convicciones determinativas que justifiquen razonablemente su decisión en
cuyo caso las normas del debido proceso se tendrán por fielmente cumplidas. En sentido
contrario, cuando la resolución aún siendo extensa no traduce las razones o motivos por los
cuales se toma una decisión, dichas normas se tendrán por vulneradas”. Asimismo, de un análisis
integral de dicha resolución que incluya su parte considerativa, la concurrencia de nueve puntos
que expresan los convencimientos determinativos que justifican la decisión adoptada por dicho
Tribunal, mismos que dan respuesta a los ocho planteados por el demandante en su recurso de
apelación (fs. 348 a 352), en el siguiente orden: 1) Según el Tribunal a quo, el caso habría sido
aperturado de oficio, conforme establece el art. 64.1 de la LRDPB, respondiendo así al punto 5 de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 587
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la apelación; 2) Dicho Tribunal estableció que, la prueba del alcosensor habría sido elaborada con la
presencia del Fiscal Policial y del investigador asignado al caso, respondiendo al cuestionamiento 2 de la
apelación; 3) Se establece también que, el procesado, por su incomparecencia en oficinas de la
Dirección General de Investigación Policial Interna para ejercer su defensa, habría sido notificado por
cédula, de conformidad al art. 54 de la mencionada norma, absolviendo el punto 3; 4) El tribunal a quo
entiende que, se tendría claramente establecida la fecha 30 de abril de 2011 como la fecha de la comisión
de la falta, absolviendo el punto 4; 5) Entendió el Tribunal que, el procesado se encontraba vistiendo
prendas policiales en vía pública y en estado de ebriedad, respondiendo a la apelación en su punto
6 de la impugnación; 6) Que, el procesado habría estado vistiendo pantalón de uniforme 1 y botas
de combate, que son característica principal de la Policía Boliviana, otra vez refiriéndose al punto
6; 7) El uso de uniformes en la Policía Boliviana, conforme entiende el mencionado Tribunal, está
regulado por el Reglamento de Uniformes de la Policía Boliviana, aprobada mediante Resolución
Administrativa del Comando General de la Policía Boliviana 0334/10 de 9 de abril de 2010, por lo que
la sociedad civil no está autorizada a utilizar ninguna prenda policial, haciendo nuevamente referencia al
punto 6; 8) El mencionado tribunal entiende que en la etapa investigativa, como ante el Tribunal
Disciplinario Departamental, se ha dado cumplimiento a lo establecido por la Ley del Régimen
Disciplinario de la Policía Boliviana, no advirtiéndose vulneración al debido proceso,
respondiendo así a las cuestionantes 1, 2, 3, 4 y 8; y, 9) El procesado habría tenido conocimiento
de que era investigado en Dirección General de Investigación Policial Interna, sin embargo no se
apersonó para asumir defensa, por lo que habría sido citado conforme prevé la norma antes
mencionada; asimismo, fue legalmente notificado con el Auto de inicio de procesamiento, asistido
por un abogado durante la audiencia de proceso oral, apeló la resolución de primera instancia,
aludiendo nuevamente al punto 3. Por lo que, se ha dado una respuesta motivada a todos los
cuestionamientos del justiciable; en tal sentido, no se puede acusar vulneración alguna a la garantía
del debido proceso en su elemento de la motivación de las resoluciones.

En consecuencia, el Tribunal de garantías al haber denegado la acción de amparo constitucional, ha


efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y aplicado debidamente los alcances
de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia, en revisión resuelve: APROBAR la Resolución
05/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 689 a 693, pronunciada por la Sala Civil Tercera del
Tribunal Departamental de Justicia de La Paz y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0095/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 588
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Expediente: 00219-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 9 de febrero de 2012, cursante de fs. 19 a 21, pronunciada dentro


de la acción de libertad formulada por Dulce Carmen Rodríguez Montero en representación
sin mandato de José Adolfo García Gonzáles contra Martha Coca Revollo, Jueza Tercera de
Instrucción de Familia del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 11 a 13, la accionante por su
representado, manifiesta los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 2 de febrero de 2012, recibió la noticia, en relación a que la Jueza Tercera de Instrucción de


Familia, Martha Coca Revollo, ordenó se expida mandamiento de apremio contra su
representado por concepto de asistencia familiar, dentro del proceso seguido por Ivana Beatriz
Mendieta. Manifiesta que actualmente se encuentra viviendo y trabajando en la localidad de
Yacuiba, departamento de Tarija, desde el mes de diciembre de 2011, extremo conocido por la
Jueza, ya que por memorial de 22 de diciembre del mismo año, Juana Miriam Montero Rojas,
propietaria del inmueble ubicado en av. Hernando Siles 2674, que habitaba en calidad de
inquilino, devolvió el aviso judicial dejado por el Oficial de Diligencias el 21 de diciembre de
2011, aclarando que su representado ya no vivía en dicho inmueble; sin embargo, este memorial
fue pasado por alto, así como el memorial de 19 de enero de 2012, mediante el cual la indicada
propietaria devolvió nuevamente la notificación de 19 de enero de 2012, reiterando que José
Adolfo García Gonzáles ya no vive en el domicilio indicado, ignorando lo dispuesto por los arts.
124, 125 y 126 del Código de Procedimiento Civil (CPC), que dispone la citación por edicto
cuando se ignore el domicilio de la persona, aspecto que no fue observado por la autoridad
demandada, que expidió el mandamiento de apremio contra su representado, cuando lo que
correspondía era la notificación con la liquidación de la asistencia familiar mediante edictos.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

La accionante por su representado, alega que está siendo perseguido indebidamente, atentando
contra su derecho a la libre locomoción y circulación; a la garantía de protección oportuna,
efectiva por parte de jueces y tribunales, así como al debido proceso.

I.1.3. Petitorio

Solicita se disponga la nulidad del Auto que ordena el correspondiente mandamiento de apremio
contra su representado, por consiguiente el cese de la persecución indebida por parte de la
autoridad demandada. Asimismo, solicita se condene a la autoridad demandada en
responsabilidad penal, a daños y perjuicios, costas y multa.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

La audiencia pública se realizó el 9 de febrero de 2012 a horas 14:30, según consta en acta
cursante a fs. 19, produciéndose los siguientes actuados:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 589


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

Por informe de Secretaría del Tribunal de garantías, en audiencia pública, se establece que la
parte accionante no se hizo presente pese a estar legalmente notificada; motivo por el que no
existe ratificación ni ampliación de la acción.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

También por informe de Secretaría del Tribunal de garantías en audiencia pública (fs. 13), se
tiene que, la autoridad demandada no concurrió a la audiencia, sin embargo presentó informe
escrito cursante de fs. 17 a 18, por el que la Jueza Tercera de Instrucción de Familia, manifestó
lo siguiente: a) Dentro del proceso de asistencia familiar, seguido por Ivana Beatriz Mendieta
contra el ahora accionante, que se tramita en su Juzgado, se tiene que en ejecución de sentencia,
por decreto de 12 de noviembre de 2011, se conminó al accionante a cancelar la suma de Bs5
103.- (cinco mil ciento tres 00/100 bolivianos), por concepto de asistencia familiar devengada,
en tercero día, bajo conminatoria de expedirse mandamiento apremio; b) El Oficial de
Diligencias del Juzgado se apersonó en el domicilio real del demandado, ubicado en av.
Hernando Siles 2674 de la zona Temporal, a efectos de notificar el referido decreto, que según la
representación correspondiente, la dueña del inmueble manifestó que el demandado habitaba la
vivienda en calidad de inquilino y que éste no se encontraba, razón por la que mediante Auto de
5 de enero de 2012, se dispone la citación mediante cédula, con la liquidación y conminatoria de
pago de 12 de noviembre de 2011, efectuándose la respectiva notificación el 19 de enero de
2012 en el domicilio real de referencia, al mismo tiempo, se realizó la notificación con la
conminatoria en el domicilio procesal del abogado; c) Ante el incumplimiento en el pago
exigido, por Auto de 31 de enero de 2012, se dispone expedir el mandamiento de apremio contra
el demandado, por lo que se concluye que se cumplió a cabalidad con lo dispuesto en la SC
0448/2006, que dispone la notificación al demandado en forma personal y en caso de no ser
habido, mediante cédula, observando las formalidades previstas en el art. 121 del Código de
Procedimiento Civil (CPC); d) Es evidente que, Juana Montero Rojas, por escritos de 22 de
diciembre de 2011 y 19 de enero de 2012, devolvió las copias de notificación con la liquidación,
bajo el argumento de que el demandado, ya no vive en ese domicilio, los referidos memoriales
merecieron proveídos de 27 de diciembre de 2011 y 24 de enero de 2012, respectivamente, que
fueron rechazados por no ser parte del proceso, esto en aplicación del art. 50 del CPC, que
establece que son partes esenciales en el proceso sólo el demandante, el demandado y el juez; e)
Según el memorial de acción de libertad, la accionante indica que su representado estaría
viviendo y trabajando en la localidad de Yacuiba, desde el mes de diciembre de 2011, aspectos
que no son evidentes toda vez que el Oficial de Diligencias, ha constatado que el demandado
vive en el domicilio de referencia, según consta en la representación respectiva, en la que la
propietaria del inmueble manifestó que el demandado es inquilino de la vivienda, por lo que la
representación tiene todo el valor probatorio para dar credibilidad a lo afirmado; f) Se debe
añadir que la conminatoria para el pago de asistencia familiar fue notificado al abogado del
obligado en su morada procesal, en razón de ello, el profesional patrocinante podía haber
impugnado la notificación con la conminatoria contenida en el proveído de 12 de noviembre de
2011, sin embargo hasta la fecha no se presentó memorial alguno observando la referida
diligencia; g) El abogado de la parte demandante presentó una copia de memorial con la firma
del demandado, dirigido al Juez Segundo de Instrucción de Familia, dentro de otro proceso de
asistencia familiar, donde en el otrosí primero, en forma expresa manifiesta que su domicilio
real está ubicado en la av. Hernando Siles 2674, zona Temporal de la ciudad de Cochabamba,
expresiones que constituyen una confesión espontánea al tenor del art. 404.II del CPC, dirección
donde fue notificado con Auto de conminatoria de pago, por lo que en base a ésta prueba no
existe duda que el obligado, mantiene como domicilio la dirección señalada; h) Con todos estos
antecedentes no existe duda alguna que el domicilio del demandado es donde se han practicado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 590
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

las notificaciones mediante cédula, motivo por el que la notificación con la conminatoria se ha
regido estrictamente a la normativa procesal; y, i) En mérito a lo expuesto solicita se deniegue la
acción de libertad, con las condenaciones de ley.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, constituida en


Tribunal de garantías, pronunció la Resolución de 9 de febrero de 2012, cursante de fs. 19 a 21
de obrados, denegando la tutela impetrada por el accionante, de acuerdo a los siguientes
fundamentos: 1) El art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE), establece que la acción
de libertad ha sido instituida como un mecanismo tutelar con triple carácter: preventivo,
correctivo y reparador, reforzando su carácter de acción de defensa oportuna y eficaz que tiene
por finalidad el resguardo y protección de los derechos a la vida y a la libertad, tanto física como
de locomoción, a favor de toda persona que considere que su vida está en peligro, que está
ilegalmente perseguida, procesada o privada de su libertad personal; 2) En función a la
naturaleza jurídica de esta acción tutelar y su alcance, a partir de la SC 0160/2005-R de 23 de
febrero, se establecieron los supuestos de subsidiaridad excepcional del hábeas corpus, ahora
acción de libertad, cuando existen medios idóneos e inmediatos para impugnar el supuesto acto
o resolución ilegal que vulnera el derecho a la libertad, entendimiento que ha sido modulado y
precisado en la SC 008/2010-R de 6 de abril; 3) En ese sentido, para que se abra la tutela que
brinda ésta acción, es preciso que previamente se determine si existen los medios de
impugnación específicos e idóneos para restituir el derecho a la libertad en forma inmediata, que
en el caso concreto, el accionante por su representado, sostiene que está siendo indebidamente
perseguido, ya que el mandamiento de apremio ordenado por la Jueza demandada se hizo
ignorando su nuevo domicilio real, sin embargo no consta en los antecedentes que el accionante
hubiera formulado reclamo alguno al respecto y menos una solicitud de nulidad, por
consiguiente en el caso específico, su representado tiene un medio idóneo y eficaz antes de la
acción de libertad, esto es, debe acudir ante la Jueza que ha ordenado el mandamiento de
apremio para hacer valer sus derechos y se determine por esa autoridad si corresponde o no una
nueva notificación con la liquidación de asistencia familiar; y, 4) Se concluye que la parte
accionante activó la jurisdicción constitucional sin que previamente se haya agotado la vía
ordinaria, medio que es efectivo, inmediato e idóneo para el resguardo y respeto de sus
derechos.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y análisis de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se establece lo


siguiente:

II.1. La accionante no acredita en ninguna parte de la acción de libertad (fs. 11 a 13), que
hubiese utilizado algún medio impugnatorio ordinario contra las diligencias de notificación de
las Resoluciones judiciales cuestionadas, por las que se conmina a su representado a cancelar la
asistencia familiar devengada, disponiendo su citación mediante cédula y por la que se expide su
mandamiento de apremio; tampoco cursa en obrados elemento probatorio que permita establecer
que su representado previamente utilizó los mecanismos procesales previstos en el ordenamiento
procesal vigente para impugnar las referidas resoluciones.

II.2. No cursa en obrados, elemento probatorio alguno en que su representado, hubiere cumplido
con el pago de la liquidación de la asistencia familiar, y el mandamiento de apremio fuera ilegal.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 591


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La accionante manifiesta que la autoridad demandada no consideró el hecho que desde


diciembre de 2011, su representado reside en la localidad de Yacuiba, aspecto que es de
conocimiento de la Jueza demandada, ya que por memoriales de 22 de diciembre de 2011 y 19
de enero de 2012, Juana Miriam Montero Rojas, propietaria del inmueble donde antes vivía el
ahora representado, devolvió el aviso y cédula judicial, no habiendo sido considerados por la
referida autoridad, desconociendo lo establecido en los arts. 124, 125 y 126 del CPC, quien en
lugar de ordenar la notificación con la liquidación de la asistencia familiar por edictos, ordenó su
apremio, por lo que su representado se considera indebidamente perseguido. En consecuencia,
corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar
la tutela solicitada.

III.1. La subsidiaridad excepcional de la acción de libertad

La SC 1079/2011-R de 16 de agosto, ha señalado con relación a la acción de libertad consagrada


en el art. 125 de la Constitución Política del Estado, que: "De conformidad a la disposición
constitucional citada y en aplicación y vigencia de la Constitución Política del Estado, esta
acción se encuentra destinada a la defensa de los derechos a la vida y a la libertad personal; es
una acción de carácter extraordinario, de tramitación especial y sumarísima. A través de dicha
acción, se preserva el derecho a la vida, se evita una detención ilegal, o se repara la ilegal
restricción de la libertad o el procesamiento indebido, manteniendo las características de
inmediatez de la protección, informalismo, generalidad e inmediación; procede contra
cualquier autoridad pública, pues no reconoce fueros ni privilegios.

Ahora bien, solamente puede ingresarse al análisis de la problemática planteada mediante la


acción de libertad, cuando los actos denunciados operan como causa para la amenaza,
restricción o supresión de los derechos a la libertad física además, de agotarse previamente los
mecanismos intraprocesales para que la acción de libertad se active y; se prescindirá del
segundo requisito, de no haberse agotado los medios legales, cuando el accionante estuvo en
absoluto estado de indefensión y no tuvo la oportunidad de activar mecanismos intraprocesales.

En este sentido -como se dijo- la acción de libertad, por la urgencia de la situación, se


configura como el medio más eficaz para restituir los derechos afectados; sin embargo, en caso
de existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y
oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido,
deben ser activados previamente por el o los interesados o afectados; en estos casos, la acción
de libertad operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar
de haberse agotado estas vías específicas.

De lo expuesto precedentemente, debe establecerse que en caso de existir norma expresa que
prevea mecanismos intra-procesales efectivos y oportunos de defensa de estos derechos
fundamentales, deben ser utilizados previamente antes de activarse la tutela constitucional,
aspecto que se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos y 25 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos" (las negrillas son añadidas).

De manera específica y acorde al razonamiento expresado precedentemente, la SC 0008/2010-R


de 6 de abril, recogió, moduló y complementó el entendimiento sentado en la SC 160/2005-R de
23 de febrero, y en lo pertinente señaló que: “…en caso de existir mecanismos procesales
específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la
libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o
los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no
haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas”.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 592
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se concluye que la accionante por su
representado no ha demostrado que hubiese utilizado mecanismos intra-procesales previstos en
los arts. 436 y 149 del Código de Familia (CF) que son más idóneos y efectivos para impugnar
las resoluciones emitidas por la autoridad demandada, alegadas como lesivas a sus derechos,
tampoco interpuso recurso de reposición (art. 215 del CPC) o incidente de nulidad de la
notificación (art. 149 del CPC). Por lo que se concluye que la parte accionante activó la
jurisdicción constitucional sin haber agotado la vía ordinaria, medio más eficaz y efectivo para
el resguardo de sus derechos y garantías constitucionales.

Por los fundamentos anotados, el Tribunal de garantías al denegar la tutela impetrada a través
de la presente acción de libertad, obró correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le confiere


la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución de 9 de febrero de
2012, cursante de fs. 19 a 21, pronunciada por la Jueza Tercera de Instrucción de Familia del
Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba y en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0096/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00140-2012-01-AAC
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 5 de 13 de febrero de 2012, cursante de fs. 29 a 30 vta., pronunciada,


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Erwin Suárez Mayleva y
Fremier Pérez Moreno contra Ponciano Ruiz Quispe, Germán Miranda Guerrero, Diego
Valdir Roca Saucedo, Vocales de la Sala Penal y Administrativa y Juez Segundo de
Instrucción en lo Penal respectivamente, del Tribunal Departamental de Justicia de
Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 593


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Mediante memorial presentado el 6 de febrero de 2012, corriente de fs. 5 a 6 vta. y ampliación de


8 de igual mes y año, cursante a fs. 11 y vta., los accionantes exponen los siguientes
fundamentos de hecho y derecho.

I.1.1. Fundamentos de hecho que motivan la acción

Los accionantes manifiestan que el 11 y 14 de enero de 2012, Omar Peñaranda Domínguez junto
a otras personas, en un número aproximado de veinte, trataron de acabar con sus vidas,
incurriendo en el delito de “intento de asesinato”; efectuada la denuncia ante el Ministerio
Público, en previsión del art. 226 del Código de Procedimiento Penal (CPP), fue aprehendido y
puesto a disposición del Juez cautelar que ordenó su detención preventiva. En el mismo acto
recurrieron de apelación en forma oral, admitida bajo el argumento que no es necesario que se
formalice; siendo remitida a la Sala Penal y Administrativa. Empero, dicha Sala rechazó el
recurso y devolvió el expediente al Juzgado de origen, indicando que no se apeló legalmente y
que debía hacerse por escrito.

Como efecto de no haberse resuelto la apelación, el imputado Omar Peñaranda Domínguez,


solicitó cesación a la detención preventiva y a la fecha se encuentra con medidas sustitutivas.
Finalmente, refieren que la Sala Penal y Administrativa no les hizo entrega del proveído de
suspensión de audiencia vulnerando así su derecho de petición.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes denuncian como vulnerados sus derechos al debido proceso y a la “seguridad
jurídica”, citando al efecto el art. 115.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se conceda el amparo constitucional y se ordene a los Vocales de la Sala Penal señalar
audiencia para considerar la apelación.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 13 de febrero de 2012, a la que concurrieron los accionantes


asistidos por su abogado; los codemandados y Omar Peñaranda Domínguez, tercero interesado;
ausente el representante del Ministerio Público, según se tiene del acta cursante de fs. 25 a 28 de
obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de los accionantes, ratificó el tenor integro de la acción y la amplió indicando: a)


Debido a que los actuados del proceso fueron remitidos en el término de veinticuatro horas ante
la Sala Penal y Administrativa, no pudieron adjuntar el recurso por escrito; b) En audiencia
pública para la consideración del recurso de apelación, los Vocales recién advirtieron que no
existía el recurso por escrito e inmediatamente ordenaron la devolución del cuaderno de
investigación al Juzgado, argumentando la aplicación de los arts. 414 y 415 del CPP; c) El
referido medio de impugnación se formuló en previsión de los arts. 251 y 403 del citado código,
que prevé un trámite sumarísimo; d) A la fecha el imputado, tramitó la cesación de su detención
preventiva, sin que previamente se hubiere resuelto el recurso planteado, situación que coloca a
sus clientes en completo estado de indefensión; e) Los Vocales demandados incurrieron en
dilación, dado que debieron considerar la fundamentación oral a realizarse en audiencia y no
suspender el acto; y, f) Reiteró el petitorio de sus patrocinados.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 594
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En uso de la réplica, el abogado de los accionantes, expresó: 1) La acción de libertad no puede


ser planteada por las víctimas, dado que los accionantes no se encuentran dentro de los alcances
del art. 125 de la CPE; 2) No es negligencia del abogado la interposición oral del recurso de
apelación, el cual fue remitido dentro de las veinticuatro horas; 3) El tercero interesado efectúa
una lectura incorrecta del art. 402 del CPP, respecto del trámite del recurso de apelación
incidental para el caso de excepciones según el art. 404 del citado cuerpo legal. Disposiciones
que no son aplicables al procedimiento establecido por el art. 251 de la misma normativa; y, 4)
Es incorrecto que la audiencia se hubiere suspendido, por no haberse fundamentado en forma
escrita el recurso de apelación, en ningún momento se hizo referencia a una fundamentación
también escrita.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Germán Miranda Guerrero, Vocal de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental
de Justicia de Pando, el codemandado en audiencia, manifestó: i) De la revisión del cuaderno
procesal, se observa que a “fs. 34”, el Juez cautelar remitió el cuaderno procesal en original,
debido a que Omar Peñaranda Domínguez, apeló del Auto 18/2012, que dispuso su detención
preventiva; ii) El Vocal Ponciano Ruiz Quispe, señaló audiencia para considerar el recurso de
apelación y de la lectura de la indicada Resolución, en dos líneas la defensa manifestó haber
hecho uso del recurso de apelación conforme consta a “fs. 62”; y, iii) Fremier Pérez Moreno,
formalizó apelación el 27 de enero de 2012, que no fue enviada a Sala para su consideración, lo
que motivó la suspensión del acto, dado que el Tribunal desconocía los fundamentos del mismo
y su formalización.

Ponciano Ruiz Quispe, Vocal de la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de
Justicia, el codemandado refirió: a) En audiencia para la consideración del recurso de apelación,
se constató que no se presentó por escrito la fundamentación. En el cuaderno procesal tampoco
existe dicho medio de impugnación, constando sólo el anuncio de su interposición, dando a
entender que lo hará en setenta y dos horas; b) La norma indica que el Tribunal de alzada
resolverá en función a los puntos apelados, de acuerdo a lo resuelto por el Juez a que, no
existiendo los mismos, el Tribunal estaba impedido de realizar el análisis respectivo; c)
Recientemente cursa en el expediente un memorial que indica la formalización de la apelación,
el cual no cursaba cuando se remitió a Sala Penal y Administrativa, lo que evidencia la
negligencia del abogado; d) Tratándose de la libertad de una persona, la presente acción debió
ser de libertad y no de amparo constitucional; y, e) Solicitó se deniegue la tutela, imponiéndose
costas procesales.

En uso de la réplica, manifestó, que si bien es cierto que el abogado de los accionantes apeló,
dicho acto debe encontrarse transcrito en el acta, dado que no es suficiente manifestar que apeló.

Diego Valdir Roca Saucedo, Juez Segundo de Instrucción en lo Penal, el codemandado, en


audiencia, expresó: 1) Las apelaciones planteadas en forma oral, según la jurisprudencia
constitucional, deben ser remitidas al superior en grado dentro de las veinticuatro horas,
conforme a ello, se remitió el recurso interpuesto; y, 2) Se debe denegar la tutela, debido a que el
medio correcto debió ser la acción de libertad y no el amparo constitucional.

En uso de la duplica, indicó: i) En materia procesal penal no existe la reserva de apelación,


puesto que en la misma audiencia de consideración de medida cautelar, se puede apelar; y, ii) La
“SC 1255” (sic), refiere que no es necesario entregar copia del acta de audiencia cautelar, porque
las notificaciones se realizan en dicho acto procesal. Planteado el recurso de apelación, se
remitió inmediatamente ante el superior en grado, por cuanto no incurrió en acto ilegal alguno
que amerite la acción de amparo en su contra.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 595
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Intervención de tercero interesado

Omar Peñaranda Domínguez, tercero interesado, en audiencia a través de su abogado, manifestó:


a) En audiencia de consideración de medidas cautelares, el abogado de las supuestas víctimas
anunció el uso del recurso de apelación, pero lo hizo como una reserva, sin formalizarlo; b) El
art. 404 del CPP, establece la forma de apelar, no habiéndose cumplido con el mismo, se
suspendió el acto; y, c) Se adhirió a lo manifestado por los demás codemandados y solicitó se
deniegue la acción.

I.2.4. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Civil, Social, de Familia, Niño, Niña y Adolescente del Tribunal
Departamental de Justicia de Cochabamba, constituido en Tribunal de garantías, mediante
Resolución 5 de 13 de febrero de 2012, cursante de fs. 29 a 30 vta., concedió el amparo con
relación a los Vocales de la Sala Penal y Administrativa y denegó respecto del Juez Segundo de
Instrucción en lo Penal asimismo ordenó que los Vocales codemandados resuelvan el recurso de
apelación en audiencia pública a señalarse lo “antes posible”; con los siguientes fundamentos: 1)
El sistema recursivo del procedimiento penal está contemplado en los arts. 394 a 427 y 251.
Entre las reglas generales de los arts. 396 a 400 del citado cuerpo legal, no está previsto que los
recursos deban ser presentados por escrito; 2) En la apelación prevista por el art. 251 del CPP,
regulada para el caso de aplicación de medidas cautelares de carácter personal, no indica que
deberá interponerse por escrito; por ello, la SC 1703/2004-R, estableció que puede ser planteada
en forma oral y en audiencia para su consideración se podrá fundamentar y exhibir los elementos
probatorios, en base a los principios de oralidad e inmediación que caracterizan al actual sistema
procesal penal, razonamiento reiterado por la SC 1698/2005-R. Jurisprudencia ratificada por la
SC 0959/2011-R; 3) Los Vocales codemandados, debieron resolver el recurso de apelación
conforme a la fundamentación que hubiere realizado la parte recurrente en la misma audiencia.
Por cuanto, no resulta válido el argumento que la apelación se realizó en dos líneas, que no
consta en acta y que la Resolución versa sobre los puntos apelados, dado que ellos pudieron
extraerse de la fundamentación oral en audiencia; 4) Al haberse rechazado el recurso de
apelación, constituye un defecto formal que afecta el derecho al debido proceso consagrado en
art. 115 de la CPE; 5) Por consiguiente, el amparo constitucional, es el medio de defensa idóneo
ante la supresión de este derecho por no haberse resuelto el recurso de apelación; y, 6) Respecto
de la vulneración al derecho de petición por la no entrega de la resolución de rechazo del recurso
de apelación, no es necesario ordenar la entrega debido a que los Vocales no negaron el rechazo,
por el contrario, lo justificaron.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. En proceso penal seguido por el Ministerio Público a instancia de los accionantes contra
Omar Peñaranda Domínguez, por la presunta comisión del delito de “asesinato en grado de
tentativa” (sic); en audiencia de consideración de medida cautelar, el Juez Segundo de Instrucción
en lo Penal, dispuso su detención preventiva. Acto procesal, en el cual el abogado de los
accionantes hizo uso del recurso de apelación incidental previsto en el art. 251 del CPP, concedido
por el Juez de la causa, disponiendo la remisión de actuados ante la Sala Penal, según se advierte
del Auto Interlocutorio 18/2012 de 26 de enero (fs. 8 a 10).

II.2. En audiencia de acción de amparo, los Vocales demandados, informaron que no resolvieron el
recurso de apelación planteado por los accionantes, debido a que no lo interpusieron de manera
escrita, por cuanto no existían puntos a resolver (fs. 25 a 28).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 596
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes, denuncian la lesión a sus derechos al debido proceso y a la “seguridad


jurídica”, en razón a que habiendo planteado un recurso de apelación incidental en audiencia de
consideración de medida cautelar, concedido y remitido ante el Tribunal superior, fue rechazado
bajo el argumento que no lo interpusieron por escrito y no existiendo puntos a resolver
devolvieron actuados al Juzgado de origen. Por consiguiente corresponde analizar en revisión, si
tales argumentos son evidentes y si constituyen actos lesivos a los derechos de los accionantes
con la finalidad de conceder o no, la tutela reconocida por este medio de defensa.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

A efectos de establecer la naturaleza jurídica de la presente acción, conviene recordar que ella
deviene de la esencia o el conjunto de propiedades que hacen a su definición como tal. En ese
sentido, podemos decir, que el amparo constitucional es una acción de defensa de todos los
derechos fundamentales y garantías constitucionales establecidos o reconocidos en la Norma
Fundamental y en Tratados y Convenios Internacionales sobre Derechos Humanos y las normas de
Derecho Comunitario, ratificados por el país (art. 410.II); de donde se advierte, que a través del
amparo constitucional se tutelan derechos civiles y políticos, incluyéndose a los denominados
económicos, sociales y culturales, de ahí la amplitud en la tutela de derechos de esta acción.
Empero, ese ámbito de protección no alcanza a los derechos a la libertad y la vida que son
resguardados por la acción de libertad; los derechos a la intimidad, privacidad personal o familiar,
a la imagen, honra y reputación, tutelados a través de la acción de privacidad; y finalmente, los
derechos colectivos que son resguardados por la acción popular.

De ahí que la Constitución Política del Estado dedica el Título IV a las garantías jurisdiccionales y
acciones de defensa, entre la cuales se encuentra el presente medio de defensa como una garantía
constitucional de carácter jurisdiccional, dado que tiene por finalidad proteger y restablecer
derechos fundamentales y garantías constitucionales vulnerados por actos ilegales u omisiones
indebidas de servidores públicos y personas particulares. Otra de sus finalidades es que ante la
amenaza de la lesión a un derecho, se evite la consumación del acto ilegal u omisión indebida.

La amplitud en la protección que brinda esta garantía, se rige esencialmente, por los principios de
subsidiariedad e inmediatez, el primero entendido como el agotamiento previo o la constatación de
la inexistencia de otras vías o recursos legales para la protección inmediata de los derechos
denunciados como conculcados; por cuanto, no sustituye o reemplaza a los recursos o instancias
ordinarias preestablecidas en el ordenamiento jurídico. Respecto del segundo, su interposición
debe hacerse en el plazo de seis meses, computables a partir del conocimiento del hecho o
notificación con el acto ilegal u omisión indebida.

Finalmente, corresponde referir que esta medio de defensa tiene como características principales, el
constituirse en una acción extraordinaria, cuya tramitación es sumaria y especial según prevén los
arts. 129 de la CPE y 68 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP); inmediatez
en la protección en el entendido que una tutela tardía carecería de efecto jurídico alguno, y la
generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio, inmunidad o prerrogativa.

III.2. De la tramitación del recurso de apelación incidental en medidas cautelares

Las medidas cautelares, como instrumentos procesales tienen por objeto restringir o limitar el
ejercicio de los derechos personales o patrimoniales del imputado o de terceras personas. De
acuerdo a nuestro sistema procesal penal, pueden ser de carácter personal o real, la primera tiene
por finalidad asegurar la presencia del imputado en el juicio y evitar que se obstaculice la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 597
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

averiguación de la verdad; en cambio, la segunda está destinada a garantizar la reparación del daño
y el pago de costas y multas.

Ahora bien, la imposición de una medida cautelar de carácter personal dentro de un proceso penal,
como es la detención preventiva, responde a la ponderación que haga el Juez que tiene a su cargo
el control jurisdiccional de la investigación, de los requisitos o suficientes elementos establecidos
por la norma adjetiva penal, que den lugar a su procedencia. Determinación que puede ser
impugnada a través del recurso de apelación incidental como instrumento idóneo y efectivo a
través del cual la parte afectada recurre ante el superior jerárquico para que corrija el error o
arbitrariedad en que hubiere incurrido el inferior en grado. Teniendo presente que la aplicación de
la medida cautelar de última ratio afecta uno de los bienes jurídicos de más alto valor para una
sociedad, como es la libertad, el Código de Procedimiento Penal, prevé un medio efectivo, sumario
e inmediato como es el recurso de apelación incidental.

Es así que el art. 251 del CPP, modificado por el art. 15 de la Ley del Sistema Nacional de
Seguridad Ciudadana (LSNSC) dispone:

“La resolución que disponga, modifique o rechace las medidas cautelares, será apelable, en el
efecto no suspensivo, en el término de setenta y dos horas.

Interpuesto el recurso, las actuaciones pertinentes serán remitidas ante la Corte Superior de
Justicia, en el término de veinticuatro horas.

El Tribunal de apelación resolverá, sin más trámite y en audiencia, dentro de los tres días
siguientes de recibidas las actuaciones, sin recurso ulterior” ( las negrillas son nuestra).

Texto del cual, se advierte que el recurso de apelación incidental se constituye en el medio idóneo
e inmediato de defensa contra supuestas lesiones o restricciones al derecho a la libertad, para
impugnar la imposición de medidas cautelares en un plazo breve para su interposición y resolución
sin demora alguna. Lo que supone, que formulado el recurso, el Juez o Tribunal, debe remitir los
actuados ante el Tribunal superior en el plazo de veinticuatro horas, debiendo el superior resolver
en tres días; al respecto, cabe recordar que la jurisprudencia de este Tribunal, estableció que la
demora en la Resolución por causas justificadas, razonables y fundadas, como sería el caso de
recargadas labores, suplencias, pluralidad de imputados, etc., se otorga tres días adicionales para la
resolución, el cual no puede exceder, de darse se tornaría en dilatorio y lesivo al derecho a la
libertad del agraviado -SC 1739/2011-R de 7 de noviembre-.

III.3. La fundamentación oral del recurso de apelación incidental en medidas cautelares y la


aplicación de los principios oralidad e inmediación

Efectuada la modificación al sistema procesal penal en nuestro país a partir de la puesta en


vigencia de la Ley 1970 de 25 de marzo de 1999 (Código de Procedimiento Penal), en materia
penal rigen premisas máximas como los principios de oralidad e inmediación que se vinculan a su
vez con el principio de celeridad, que hacen a la actuación de los sujetos procesales, con la
finalidad de lograr una administración de justicia pronta y oportuna, sin dilaciones indebidas,
materializando así la disposición contenida en el art. 115 de la CPE y el principio de igualdad para
las partes del proceso. En ese sentido, la inmediación está dirigida a la relación directa entre las
partes y el órgano jurisdiccional, prescindiendo de otras formalidades o la intervención de otras
personas, permitiendo se aprecie de mejor manera los medios probatorios -en caso de medidas
cautelares elementos o indicios-; estrechamente vinculado con la oralidad del procedimiento que
hace a su inmediatez y eficacia.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 598


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Si bien es cierto que el art. 404 del CPP, prevé que el recurso de apelación incidental, se
interpondrá por escrito debidamente fundamentado, ante el mismo tribunal que dictó la resolución,
dentro de los tres días de notificada la determinación que le causa agravio; empero, para el caso de
recurrir de la decisión que disponga, modifique o sustituya una medida cautelar -art. 403.3 del
CPP- los pronunciamientos de este Tribunal, han sido uniformes al sostener: “De la interpretación
de todas las normas transcritas, se extrae que los recursos, deben ser interpuestos por escrito y
ante el juzgado que atiende el asunto, cumpliendo con las formalidades debidas; quedando claro
que no toda falta de formalidad provoca el rechazo o inadmisión del recurso, sino sólo las que
sean esenciales para dar constancia de su presentación en el lugar determinado por ley y tiempo
oportuno. Sin embargo existe una excepción a la interpretación aludida, pues el recurso de
apelación en el régimen de medidas cautelares, vale decir el referido a impugnar las
resoluciones que imponen medidas cautelares, establecido en las normas del art. 251 del CPP
del Libro Cuarto de la primera parte del mismo Código, es un recurso que por su naturaleza
(buscar la restitución de derechos fundamentales como la libertad física y la libertad de
locomoción) prescinde de ciertas formalidades, tales como la exigencia de ser interpuesto por
escrito, pues puede ser interpuesto en forma oral en la audiencia que se dicta la resolución de
medidas cautelares, resultando como lógica consecuencia que la fundamentación podrá
realizarse ante el Tribunal ad quem donde sea radicado el recurso, ya que será éste quien
precise de escuchar la fundamentación no sólo de la parte apelante sino también del Ministerio
Público o de la parte querellante, para acopiar los elementos de convicción suficientes a fin de
revocar o confirmar la resolución apelada. Este entendimiento ya fue asumido por este Tribunal
en la SC 1703/2004-R de 22 de octubre que señala lo siguiente:
(…)

Consiguientemente, la interposición del recurso de apelación contra la Resolución que imponga


o modifique, una medida cautelar personal, puede ser planteada en forma oral en la misma
audiencia, no siendo necesario que posteriormente sea formalizado o fundamentado por escrito,
-conforme señala la recurrente-; con mayor razón, si se tiene en cuenta, que la audiencia
señalada por el Tribunal de Alzada para la consideración del recurso, está orientada a que las
partes, en virtud de los principios de oralidad e inmediación que caracterizan al actual sistema
procesal, expresen los fundamentos del recurso y exhiban los elementos probatorios en la
audiencia pública señalada al efecto, y por lo mismo, las previsiones contenidas en los arts. 403
y 404 del citado Código no son aplicables al caso que se analiza.

En coherencia con el razonamiento anterior, también debe entenderse que el Tribunal ad quem,
sólo podrá rechazar el recurso cuando luego de señalar la audiencia, el apelante no acuda a este
acto, o lo que es lo mismo no podrá rechazar in límine el recurso por no haber sido presentado
por escrito luego de dictada la resolución que imponga, rechace o modifique medidas
cautelares” (SC 1698/2005-R de 19 de diciembre, razonamiento reiterado por la SC 1500/2011-R
de 11 de octubre) (las negrillas son nuestras).

De donde se concluye, que el recurso de apelación incidental interpuesto contra la decisión que
imponga, modifique o sustituya una medida cautelar, podrá plantearse de forma oral en el mismo
acto que dio lugar a su aplicación, sin necesidad que en audiencia para su consideración por el
Tribunal superior, se exija su previa presentación o fundamentación escrita por el agraviado, en el
entendido que no existe impedimento alguno para que la fundamentación también sea oral. Ello se
justifica en dos razones; la primera, por la naturaleza del derecho o bien jurídico protegido -la
libertad- y segundo, porque los actos procesales, de acuerdo a la Ley 1970, se rigen esencialmente
por los principios de oralidad e inmediación.

III.4. De los derechos invocados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 599


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.4.1. Debido proceso

Instituto jurídico, reconocido como una garantía jurisdiccional, principio constitucional y derecho
fundamental arts. 115.II, 117, 137 y 180-, que a través de los uniformes pronunciamientos
emanados por el Tribunal Constitucional, se precisó que es un instrumento de defensa de derechos
fundamentales y garantías constitucionales durante la tramitación del proceso judicial o
administrativo, en el cual los actos procesales deberán desarrollarse conforme al procedimiento
previsto en la norma. En ese sentido, el debido proceso tiene por objeto la materialización de los
valores jurídicos de justicia e igualdad, dado que sólo a través de ellos, se logrará la eficacia
máxima de los derechos fundamentales contenidos en la Norma Fundamental.

Como mecanismo de protección de derechos fundamentales y garantías constitucionales,


garantiza un proceso exento de posibles abusos originados en actuaciones u omisiones
procesales, o en decisiones que diriman determinada situación jurídica o administrativa; se
constituye en un instrumento de sujeción a las normas prescritas en el ordenamiento jurídico y
en el medio de protección de otros derechos fundamentales contenidos como elementos del
debido proceso.

III.4.2. Seguridad jurídica

En el Fundamento Jurídico III.1 del presente fallo y en función al contenido del art. 128 de la CPE,
se precisó que este medio de defensa tutela derechos fundamentales y garantías constitucionales
reconocidos en el texto constitucional y en las leyes; pero además, en Tratados y Convenios
Internacionales sobre Derechos Humanos y las normas de Derecho Comunitario, ratificados por el
país (art. 410.II). Delimitación que de manera taxativa, restringe la protección de ese medio de
defensa de forma directa o aislada a principios constitucionales, en el entendido que contiene
características sustancialmente distintas con relación a los derechos fundamentales.

Ahora bien, el art. 178 de la Norma Fundamental, reconoce a la seguridad jurídica como un
principio constitucional, sobre el cual se sustenta la potestad de impartir justicia, así lo entendió la
SC 0070/2010-R de 3 de mayo, al afirmar: “'…la seguridad jurídica como principio emergente y
dentro de un Estado de Derecho, implica la protección constitucional de la actuación arbitraria
estatal; por lo tanto, la relación Estado-ciudadano (a) debe sujetarse a reglas claras, precisas y
determinadas, en especial a las leyes, que deben desarrollar los mandatos de la Constitución
Política del Estado, buscando en su contenido la materialización de los derechos y garantías
fundamentales previstos en la Ley Fundamental, es decir, que sea previsible para la sociedad la
actuación estatal; este entendimiento está acorde con el nuevo texto constitucional, que en su
art. 178 dispone que la potestad de impartir justicia emana del pueblo boliviano y se sustenta,
entre otros, en los principios de independencia, imparcialidad, seguridad jurídica, probidad y
celeridad" (las negrillas son nuestras).

Razonamiento que nos lleva a concluir que a través de los principios y valores contenidos en la
norma fundamental, se busca la eficacia máxima de los derechos fundamentales y garantías
constitucionales; por cuanto, su resguardo sólo podrá hacerse efectiva cuando se advierta su
vinculación con un derecho fundamental objeto de tutela constitucional.

III.5. Análisis del caso concreto

III.5.1. Con relación a los Vocales de la Sala Penal y Administrativa

En audiencia de consideración de medidas cautelares desarrollada el 26 de enero de 2012, dentro


del proceso penal seguido por el Ministerio Público a instancia de los accionantes contra Omar
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 600
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Peñaranda Domínguez, por la presunta comisión del delito de tentativa de asesinato, el Juez
Segundo de Instrucción en lo Penal, ordenó la detención preventiva del imputado; medida
recurrida en apelación incidental en el mismo acto procesal por el abogado de los accionantes,
según se advierte de la parte in fine de la Resolución 18/2012 de la indicada fecha, concedida
inmediatamente, el Juez ordenó su remisión ante la Sala Penal y Administrativa del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando. Empero, en audiencia pública para su consideración y
resolución -cuya fecha no consta en antecedentes y tampoco informaron las partes-, los Vocales
codemandados, rechazaron el indicado medio de impugnación bajo el argumento que los
accionantes, no formalizaron ni fundamentaron por escrito y no existiendo puntos a considerar
para resolución, suspendieron el acto y devolvieron actuados al Juzgado de origen.

En base a lo expuesto en el Fundamento Jurídico III.3 de la presente Sentencia Constitucional


Plurinacional, pese a que el Recurso de Apelación Incidental se planteó de forma oral en
audiencia de consideración de medidas cautelares, por sus características propias y los principios
que rigen el sistema procesal penal -según se explicó-, no existe argumento legal alguno, que
impida su fundamentación oral en audiencia pública, donde los afectados por la decisión del
Juez, en el caso concreto los accionantes, expresen los agravios sufridos. En síntesis, la
determinación de los Vocales codemandados, de suspender la audiencia para considerar y
resolver el recurso, bajo la excusa de no haberse formalizado por escrito, constituye un acto
ilegal, que lesionó el debido proceso, como derecho fundamental, que implica la estricta
sujeción al procedimiento establecido.

En ese sentido, corresponde conceder la tutela invocada en la presente acción, a objeto de


restablecer las formalidades legales para que los Vocales de la Sala Penal y Administrativa del
Tribunal Departamental de Justicia de Pando, sustancien y resuelvan el recurso de apelación
planteado por los accionantes, permitiendo que en dicho acto procesal, expresen los presuntos
agravios que hubieren sufrido a consecuencia de la decisión del Juez de la causa y fundamenten
el mismo.

La seguridad jurídica, como uno de los principios que sustentan el modelo constitucional, sobre
el que fundamenta la potestad de impartir justicia, no es susceptible de tutela directa a través de
este medio de defensa; empero, cuando se advierta la lesión a un derecho fundamental o garantía
constitucional vinculado con este principio, podrá activarse la protección que brinda la acción de
amparo constitucional y no así de manera aislada, según se explicó en el Fundamento Jurídico
III.4.2 de este fallo.

III.5.2. Con relación al Juez Segundo de Instrucción en lo Penal

Interpuesto el recurso de apelación incidental el 26 de enero de 2012, en el mismo acto, el Juez


Segundo de Instrucción en lo Penal, ordenó su remisión ante el Tribunal superior para su
consideración y resolución; actuación que de ninguna manera, advierte lesión a derechos
fundamentales y garantías constitucionales, dado que imprimió el trámite previsto para esa
instancia -Fundamento Jurídico III.2 de esta Sentencia Constitucional Plurinacional-.
Consecuentemente, corresponde denegar la acción respecto de esta autoridad.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber concedido la tutela invocada respecto de los


Vocales de la Sala Penal y Administrativa; y denegado con relación al Juez Segundo de
Instrucción en lo Penal, obró correctamente.

POR TANTO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 601


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la
Resolución de 5 de 13 de febrero, cursante de fs. 29 a 30 vta., pronunciada por la Sala Civil,
Social, de Familia, Niño, Niña y Adolescente del Tribunal Departamental de Justicia de Pando;
y, en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada en los mismos términos del Tribunal de
Garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Dra.Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0097/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de libertad
Expediente: 00155-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 03/2012 de 15 de febrero, cursante de fs. 16 a 18, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Nery Franklin Choque Rivero, contra Ricardo
Maldonado Aliaga, Juez Quinto de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 14 de febrero de 2012, cursante de fs. 2 a 3, el accionante expresa


los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante refiere que, el 11 de febrero de 2012 mientras se dirigía a su hogar, tuvo un


problema de riñas y peleas, donde sin motivo se le agredió y éste se defendió, razón por la que
fue aprehendido y conducido a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de la ciudad de La
Paz (FELCC), acusado de robo, “cuando simplemente pasaba por el lugar” (sic), razón por la
que se lo puso a disposición del Fiscal, quien confirmó la aprehensión, mientras analizaba si
existían elementos de convicción suficientes de que el ahora accionante hubiera participado en la
comisión del delito, por lo que a horas 18:00, tras haber efectuado la reparación del daño a la
víctima a fin de salir de la detención, el Fiscal determinó que no existían suficientes elementos
de convicción, disponiendo que sea puesto a consideración del Juez cautelar, de acuerdo al art.
228 del Código de Procedimiento Penal (CPP); quien en franco incumplimiento del debido
proceso no dispuso su libertad, por el contrario, incumpliendo el art. 226 del CPP, ordenó su
detención sin respaldo de normativa legal alguna.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 602


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Añade que, tanto la Policía y la Fiscalía cumplieron los plazos previstos en los arts. 226 y 227
del CPP, en el primer caso para poner al accionante a disposición de la Fiscalía y en el segundo,
para ponerlo a disposición del Juez cautelar; no obstante después de 36 horas de estar detenido
ilegalmente en celdas judiciales, el Juez cautelar de turno habiendo tomado conocimiento que el
accionante tenía antecedentes de otro caso, no dispuso su libertad, ordenando y conminando al
Fiscal del caso para que pronuncie imputación en su contra y asimismo aplicación de medidas
cautelares, desconociendo que la autoridad jurisdiccional no tiene atribuciones investigativas y
si el Fiscal consideró que no existía elemento indiciario suficiente éste no puede imputar, caso
contrario estaría violando la ley. Manifiesta que al momento de la presentación de la acción de
libertad, 14 de febrero de 2012, se encuentra privado de su libertad por más de 80 horas
continuas, de manera ilegal por el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, quien vulnerando los
derechos constitucionales no definió su situación procesal en el plazo debido, encontrándose
detenido sin fundamento legal.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante señala que está detenido de manera ilegal por más de 80 horas, sin citar derecho o
norma constitucional alguna.

I.1.3. Petitorio

Se solicita se declare procedente la acción y se disponga su inmediata libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 15 de febrero de 2012, según consta en acta cursante de fs. 13
a 15, produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Por informe de Secretaría de audiencia pública de acción de libertad, Resolución 03/2012 de 15


de febrero, emitida por el Juez Tercero de Sentencia, se establece que el accionante se
encontraba presente en sala sin su abogado; dándose lectura al contenido de la acción de
libertad, razón por la que no existe ratificación o ampliación.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, en la audiencia de consideración de la acción de


libertad de 15 de febrero de 2012 (fs. 13 a fs. 15), manifestó lo siguiente: a) De la revisión del
sistema de seguimiento de causas, se tiene que el 11 de febrero de 2012 a horas 18:00, el
accionante fue remitido a su autoridad quien se encontraba de turno; b) Se ha evidenciado que
Nery Franklin Choque Rivero fue sentenciado a tres años de presidio a cumplir en el Penal de
San Pedro por el delito de robo agravado, dentro de un procedimiento abreviado en el Juzgado
Segundo de Instrucción en lo Penal, beneficiándose con la suspensión condicional de la pena; c)
Llama la atención a la autoridad demandada que para un caso en el que se tiene múltiples
antecedentes de los coimputados Nery Franklin Choque Rivero y Ricardo Canaza Siñani, el
Fiscal Roger Joaquín Velásquez Alcázar solicite la aplicación del art. 228 del CPP, es decir, que
se los ponga en libertad, por un hecho de robo suscitado en la plaza Eguino contra Germán
Silva; quienes se habrían dado a la fuga para posteriormente ser interceptados en posesión de las
pertenencias y ser conducidos a la FELCC; d) En el entendido de que el ahora accionante tiene
antecedentes por similares delitos, la autoridad demandada al haber dispuesto que el Fiscal haga
un nuevo análisis del caso y darle un plazo de 24 horas para presentar una imputación, no ha
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 603
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

incurrido en aprehensión ilegal, puesto que en aplicación del art. 115 de la Constitución Política
del Estado (CPE), las autoridades jurisdiccionales deben ejercer la tutela judicial efectiva para la
víctima, la sociedad y las instituciones, de tal forma que la oportunidad que se le da con la
suspensión condicional de la pena no se convierta en una burla, toda vez que las medidas
impuestas para la referida suspensión han sido incumplidas por el imputado; se debe velar
porque la reincidencia no sea una costumbre en el sistema procesal penal; e) No se ha vulnerado
derechos con la solicitud de nuevo análisis efectuado al Fiscal, ya que se notificó el lunes 13 de
febrero a horas 15:45, y éste recién el 15 de febrero en horas de la mañana devuelve la solicitud
que se le efectuó, respondiendo que en el presente caso no existen mayores indicios de
responsabilidad penal, ya que no hay testigos ni otros elementos, asimismo la víctima manifiesta
que no quiere continuar con ninguna acción y que se da por resarcido el daño en razón del
acuerdo arribado entre partes, y, que el Ministerio Público ha buscado la solución del conflicto
de conformidad a los arts. 7 y 65 de la Ley 2175 de 13 de febrero de 2001, motivo por el que las
investigaciones continuarán y con su resultado se pronunciará de acuerdo a ley; f) Ante ésta
situación, la autoridad demandada libró el correspondiente mandamiento de libertad a favor del
ahora accionante; g) La autoridad demandada deslinda toda responsabilidad respecto del
accionante, toda vez que tiene habitualidad y reincidencia en delitos de robo y robo agravado,
por lo que si éste continúa con este comportamiento será nuevamente aprehendido por un caso
grave y la autoridad demandada va a ser procesada, así como el juez de garantías, si éste último
dispone la libertad inmediata del accionante, puesto que es un peligro efectivo para la sociedad;
y, h) Habiendo agotado esfuerzos para que el Fiscal Roger Joaquín Velásquez Alcázar presente
imputación formal, la autoridad demandada señala textualmente que: “(…) prefiero ser
procesado por no liberar a delincuentes reincidentes a que me procesen por liberarlos…” (sic).

El representante del Ministerio Público destinado a acciones de libertad, en audiencia pública de


la acción de libertad (fs. 15), manifestó que la autoridad demandada ya habría dispuesto el
mandamiento de libertad pertinente y que la acción de libertad no habría cumplido con el
principio de subsidiaridad, razones por las que solicita se deniegue la tutela impetrada.

I.2.3. Resolución

El Juzgado de Tercero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,


constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 03/2012 de 15 de febrero, cursante de
fs. 16 a 18, denegando la tutela impetrada por el accionante, de acuerdo a los siguientes
fundamentos: 1) Que Nery Franklin Choque Rivero interpone acción de libertad por haber sido
aprehendido por la Policía el 11 de febrero de 2012 y no haber sido remitido dentro de los plazos
establecidos por ley ante las autoridades, señalando que la autoridad jurisdiccional le habría
privado por más de 80 horas su libertad de manera ilegal, situación que es rechazada por el Juez
demandado , manifestando que éste es reincidente, tiene una Sentencia ejecutoriada por
procedimiento abreviado y que al presente venía gozando de una suspensión condicional de la
pena; 2) La autoridad demandada, habiendo conocido el presente caso dentro del plazo
establecido, solicitó al Fiscal para que se pronuncie sobre la conducta anterior del ahora
accionante, que ante su negativa y ratificatoria para la aplicación del art. 228 del CPP y ante la
inexistencia de imputación, dictó el Auto de 15 de febrero, es decir, el mismo día de la audiencia
de acción de libertad, disponiendo la libertad pura y simple de los sindicados Franklin Choque
Rivero y Ricardo Canaza Siñani; 3) La acción de libertad es un proceso constitucional de
naturaleza tutelar que tiene por finalidad brindar una protección inmediata y efectiva de los
derechos fundamentales a la vida y a la libertad física, en los casos que sea ilegal o
indebidamente restringidos, suprimidos o amenazados por actos u omisiones ilegales indebidas,
en el presente caso se tiene que la autoridad demandada encontrándose de turno, puso el 12 de
febrero en conocimiento del Fiscal Roger Joaquín Velásquez Alcázar, para que haga un análisis
del caso, siendo éste notificado el 13 de febrero a horas 15:45; dicha autoridad se pronuncia el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 604
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

15 de febrero, mismo día de la audiencia de acción de libertad, con los fundamentos expuestos
anteriormente, señalando que las investigaciones continuarán; y, 4) “(…) que la autoridad
jurisdiccional cumplió con sus deberes y facultades, pronunciándose en los plazos establecidos
por ley, si bien existiría incumplimiento de plazos, en este caso no es atribuible al órgano
jurisdiccional, sino al Ministerio Público que no es parte accionada, sin lugar a la tutela
planteada.” (sic).

II. CONCLUSIONES

De la revisión y análisis de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se establece lo


siguiente:

II.1. Por Auto Interlocutorio de 15 de febrero de 2012 (fs. 8), dictado por la autoridad
demandada, Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, así como por su informe en audiencia de
consideración de acción de libertad (fs. 13 a 15), se establece que el 11 de febrero de 2012, a
horas 4:10 aproximadamente, Nery Franklin Choque Rivero y Ricardo Canaza Siñani, fueron
aprehendidos por agentes de la FELCC de la ciudad de La Paz, por el supuesto robo de una
mochila y un billetera a Germán Henry Silva Soto, siendo remitidos al Fiscal Roger Joaquín
Velásquez Alcázar, quien en la misma fecha mediante requerimiento solicitó al Juez cautelar de
turno resuelva la situación legal de los aprehendidos en virtud del art. 228 del CPP, toda vez que
las partes habrían suscrito un acuerdo reparatorio y que no encontraba indicios suficientes para
determinar la responsabilidad de los aprehendidos; sin embargo, la autoridad demanda mediante
providencia de 12 de febrero de 2012, devuelve el mencionado requerimiento al Fiscal para que
éste haga un nuevo análisis del caso y presente imputación formal en el plazo de veinticuatro
horas, en el entendido de que la autoridad jurisdiccional se habría percatado que el ahora
accionante tendría una Sentencia condenatoria ejecutoriada por el delito de robo y que estaría
beneficiándose de la suspensión condicional de la pena; la referida providencia fue notificada al
Fiscal el 13 de febrero de 2012, que habría sido respondida el 15 de febrero, ratificándose en su
requerimiento, razón por la que la autoridad demandada, mediante Auto Interlocutorio de 15 de
febrero de 2012 (fs. 8), de conformidad al art. 228 del CPP, dispone la libertad pura y simple de
los sindicados Franklin Choque Rivero y Ricardo Canaza Siñani, emitiendo el correspondiente
mandamiento de libertad en la misma fecha (fs. 9). De lo expuesto se concluye que el accionante
estuvo aprehendido desde su remisión al Juez cautelar (11 de febrero) hasta el 15 de febrero de
2012, por más de 86 horas, momento en el que la autoridad demandada definió su situación
procesal.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que se encuentra detenido ilegalmente desde el 11 de febrero de 2012, al


haber sido aprehendido por un supuesto hecho de robo, habiendo sido conducido a la FELCC de
la ciudad de La Paz y puesto a disposición del Fiscal de turno, quien en horas de la tarde
determinó que no existían suficientes elementos de convicción y dispuso su remisión al Juez
cautelar de turno, para que éste determine su situación procesal de acuerdo al art. 228 del CPP;
sin embargo el Juez de turno, ahora autoridad demandada, en vez de resolver la situación
jurídica del accionante el 12 de febrero de 2012, emite en esa fecha un Auto motivado por el que
devuelve el requerimiento al Fiscal asignado al caso, para que éste efectúe un nuevo análisis y
presente imputación formal, desconociendo la normativa vigente que prohíbe al juez ejercer
funciones investigativas, razón por la que la autoridad demandada habría vulnerado sus derechos
constitucionales al no haber definido su situación procesal en el plazo debido, encontrándose
detenido sin fundamento legal al momento de la interposición de la presente acción tutelar. En
consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela impetrada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 605
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.1. La acción de libertad traslativa o de pronto despacho.

Dentro de la clasificación doctrinal del habeas corpus -ahora acción de libertad- se encuentra la
acción de libertad traslativa o de pronto despacho, consagrada implícitamente en el art. 125 de la
CPE, que fue definida por la SC 0044/2010-R de 20 de abril, en los siguiente términos: “(…) se
debe hacer referencia al hábeas corpus traslativo o de pronto despacho, a través del cual lo que
se busca es acelerar los trámites judiciales o administrativos cuando existen dilaciones
indebidas, para resolver la situación jurídica de la persona que se encuentra privada de
libertad.”.

Siguiendo éste razonamiento, la SC 080/2010-R de 3 de mayo, al tratar los supuestos en los que
no opera la subsidiaridad excepcional y corresponde ingresar al análisis de fondo, refiere que:
“b) Al haber privación de libertad y evidente negligencia o dilación por parte de las
autoridades que rigen la actividad procesal penal, -por ejemplo si fijan audiencias de
consideración con plazos no razonables, la injustificada suspensión, entre otras circunstancias-
”. De lo anotado, se extrae claramente que la acción de libertad traslativa o de pronto despacho
tiene por objetivo precautelar aquellos supuestos en los que exista una demora o dilación
injustificada por parte de la autoridad judicial o administrativa que está llamada a definir la
situación jurídica de la persona que se encuentra privada de libertad.

III.2. Plazo para resolver la situación procesal del aprehendido por la Fiscalía arts. 226,
228 y 303 del CPP

En términos generales, toda medida cautelar de carácter personal está limitada temporalmente
por disposición constitucional, dada su naturaleza coercitiva y limitativa de la libertad del ser
humano. Por ende, si la Fiscalía dispone la aprehensión del sindicado, debe ponerlo a
disposición del juez en el plazo de veinticuatro horas, si ha presentado imputación formal en su
contra y considera que deba continuar privado de su libertad (art. 226 CPP). Si la Fiscalía una
vez analizados y evaluados los resultados de las investigaciones preliminares, concluye que no
existen elementos de convicción para formalizar imputación, no puede disponer la libertad del
aprehendido, sino que debe remitir al detenido a conocimiento del juez cautelar, quien definirá
su situación procesal (art. 228 CPP). De lo esgrimido, se concluye que la exigencia de
inmediatez para la definición de la situación procesal del detenido por parte de la autoridad
jurisdiccional, se sustenta en la garantía constitucional que tiene toda persona de ser juzgada sin
dilaciones indebidas, consagrada en el art. 115.II de la Constitución Política del Estado y en
instrumentos internacionales de derechos humanos ratificados por el Estado boliviano y que
forman parte del bloque de constitucionalidad, por mandato expreso del art. 410.II de la Ley
Fundamental, aplicable a la problemática en cuestión.

Al respecto, la SC 0169/2004-R de 2 de febrero, estableció que: “(…) de las disposiciones


contenidas en los arts. 226, 228 y 303 CPP se tiene conforme ya se señaló, que ordenada la
aprehensión por la autoridad fiscal, la persona aprehendida debe ser puesta a disposición del
juez en el término de 24 horas, para que éste a su vez, en ejercicio de su competencia, defina su
situación procesal aplicando una de las medidas cautelares de carácter personal (detención
preventiva o medidas sustitutivas) en caso de existir imputación formal en su contra o de lo
contrario disponer su libertad irrestricta. Para tal fin el juez tiene un plazo de 24 horas, lo que
significa que esta definición podrá ser adoptada inmediatamente el imputado sea puesto a su
disposición o en las subsiguientes horas, pero en ningún caso después de las 24 horas, plazo
máximo para resolver la situación del imputado” (las negrillas nos pertenecen).

Por otra parte, se tiene establecido que, si la Fiscalía por cualquier circunstancia no requiere en
el plazo de veinticuatro horas ante el juez cautelar, éste dispondrá de oficio o a petición de parte,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 606
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la inmediata libertad del detenido, salvo que el querellante haya solicitado la detención
preventiva y el juez la considere procedente (art. 303 CPP); motivo por el cual el juez está
constreñido a pronunciarse en dicho plazo sobre la situación del aprehendido por la Fiscalía, por
las mismas razones expuestas en el párrafo anterior, añadiendo que, debe respetarse la división
de roles y funciones que son propios de todo sistema procesal penal de raigambre acusatorio,
donde se diferencian claramente las funciones capitales de acusar, juzgar y defender, donde
ninguno puede interferir o suplir el rol del otro, por tanto el juzgador no está facultado para
direccionar, sugerir o conminar al Ministerio Público para que éste se pronuncie en uno u otro
sentido, como la exigencia de la presentación de una imputación formal; un entendimiento
contrario significaría una vulneración de las competencias y atribuciones de los sujetos
procesales definidos por la Constitución y la ley. Este criterio fue expresado en la SC 227/2004-
R de 16 de febrero, que señaló: “...en el sistema penal actual rige el principio acusatorio, según
el cual se tiene que diferenciar la función que tiene el Juez de juzgar y no realizar actos
investigativos y la función que tiene el Fiscal de investigar, imputar, solicitar la aplicación de
medidas cautelares y acusar, es decir que los últimos no realizan acto jurisdiccional alguno,
todo en el marco establecido en la previsión del art. 279 CPP…”.

III.3. Análisis del caso concreto

De los antecedentes cursantes en obrados, se evidencia que el accionante, fue puesto a conocimiento
de la autoridad demanda el 11 de de febrero del año en curso, a horas 18:00 aproximadamente, sin
que el Fiscal asignado al caso, Roger Joaquín Velásquez Alcázar, haya presentado imputación
formal en contra del accionante, tampoco solicitud alguna de aplicación de medida cautelar,
solicitando mediante requerimiento que se defina su situación procesal, al no haber encontrado
indicios suficiente para determinar la responsabilidad del aprehendido. No obstante, el Juez Quinto de
Instrucción en lo Penal, habiendo tomando conocimiento que el accionante tendría antecedentes
penales por otro hecho delictivo, mediante providencia de 12 de febrero de 2012, devuelve el
mencionado requerimiento al Fiscal mencionado para que éste realice un nuevo análisis del caso
y presente imputación formal en el plazo de veinticuatro horas; sin embargo esta autoridad fiscal
recién el 15 de febrero responde a la providencia referida, ratificándose en el contenido de su
requerimiento, motivo por el que el Juez cautelar mediante Auto Interlocutorio de 15 de febrero
de 2012, dispone la libertad del aprehendido, determinación ilegal conforme lo expresado en el
Fundamento Jurídico III.2 de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional, ya que la
autoridad denunciada estaba constreñida a resolver la situación jurídica del accionante en el
plazo de veinticuatro horas, señalando día y hora de audiencia al efecto, en aplicación de los
principios procesales constitucionales de oralidad, celeridad e inmediación, previstos en el art.
180 de la Ley Fundamental; sin embargo, la autoridad demandada excediéndose en sus
funciones y contraviniendo el art. 279 del CPP, posterga su pronunciamiento arrogándose
funciones de investigador y acusador que no le corresponden por ley; en consecuencia se
evidencia que la autoridad demandada incurrió en una detención indebida por más de ochenta y
seis horas, conforme lo expresado precedentemente. De otra parte, si la autoridad demandada
consideraba que el Representante del Ministerio Público se estaba apartando considerablemente
de los preceptos legales vigentes en la materia, o si constataba la vulneración de los principios
de legalidad y oficiosidad que rigen al Ministerio Público, debió remitir antecedentes a la
Fiscalía de Distrito, de conformidad a los principios de unidad y jerarquía (arts. 3 y 4 Ley 2175),
a efectos que ésta instancia determine las responsabilidades respectivas, si correspondiere.
Por su parte, se tiene que el Juez de garantías, tampoco obró correctamente al denegar la tutela
invocada por el accionante, limitándose a reproducir los ilegales fundamentos expresados por la
autoridad demandada y señalar que si bien se advierte un incumplimiento de plazos, éste no
sería atribuible al órgano jurisdiccional sino al Ministerio Público, motivo por el que la
autoridad demandada habría cumplido sus deberes y facultades, situación que no condice con la
verdad, conforme lo manifestado en el Fundamento Jurídico III.2 de la presente Sentencia. De
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 607
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

igual forma, se advierte que si bien la autoridad demandada dispuso la libertad pura y simple del
accionante, éste lo hizo cuando se encontraba privado de la misma, por lo que el Juez de
garantías no observó la SC 0451/2010-R de 28 de junio, que expresa que en los casos en que se
denuncie detención indebida a través de la acción de libertad, corresponde la tutela si se ha
interpuesto la acción estando en tal situación, señalando textualmente que: ”Cuando se alega
privación de libertad personal, la norma constitucional (art. 125 de la CPE), señala que toda
persona que esté indebida o ilegalmente privada de su libertad personal, podrá interponer la
acción de libertad y solicitar al juez o tribunal competente" 'se restituya su derecho a la
libertad'.

Lo cual significa que en estos casos, la acción de libertad debe ser interpuesta cuando la lesión
al derecho a la libertad existe; de no ser así, se desnaturalizaría la esencia de la presente
acción de defensa, dado que el petitorio de que 'se restituya su derecho a la libertad', ya no
tendría sentido si está en libertad.

En consecuencia, desde el orden constitucional, se debe tener en cuenta los siguientes aspectos
procesales:

Primero.- Cuando el acto ilegal o indebido denunciado sea la detención o privación de libertad
física del agraviado o accionante, la acción de libertad debe ser interpuesta mientras exista la
lesión, no cuando haya cesado.

Segundo.- En los casos, en que presentada la acción de libertad conforme a esta exigencia,
luego de la notificación a la autoridad, funcionario o persona denunciada o accionada, con la
admisión de la misma, ésta libera al accionante o agraviado, ello no impide la prosecución del
trámite y la otorgación de la tutela si es que corresponde, a los efectos de la reparación de los
daños causados por la privación de libertad y en su caso los efectos que corresponda”.

Por los fundamentos anotados, el Juez de garantías al denegar la tutela impetrada a través de la
presente acción de libertad, obró incorrectamente.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de
la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º. REVOCAR Resolución 03/2012 de 15 de febrero, cursante de fs. 16 a 18, pronunciada por
el Juzgado Tercero de Sentencia en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz; y
en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada.

2º. Remítase copia de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional a la Fiscalía de Distrito


de La Paz, a efectos de que la referida autoridad en las instancias respectivas determine si
existen indicios de responsabilidad disciplinaria del Fiscal de materia Roger Joaquín Velásquez
Alcázar, conforme los fundamentos expuestos, en el entendido de que las actuaciones del
Ministerio Público en el presente caso debieron regirse por los principios de legalidad,
obligatoriedad, objetividad y defensa de los intereses de la sociedad, contemplados en la Ley
2175.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 608


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0101/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00097-2012-01-AL
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución 01/2012 de 7 de febrero, cursante de fs. 14 a 15, pronunciada dentro de la


acción de libertad interpuesta por Freddy Flores en representación de Lourdes Dionicia Tórrez
contra Heydi Jarro Salvatierra, funcionaria de la Brigada de Protección a la Familia de la ciudad de
Potosí.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El 6 de febrero de 2012, en dependencias del Juzgado de Partido Mixto, Liquidador y de


Sentencia de Tupiza del Distrito Judicial de Potosí; Freddy Flores en representación sin mandato
de Lourdes Dionicia Tórrez, de manera verbal, interpone acción de libertad contra Heydi Jarro
Salvatierra, funcionaria de la Brigada de Protección a la Familia, con los siguientes
fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante por su representada afirma, que el 6 de febrero del año en curso, la funcionaria antes
señalada procedió a detenerla indebidamente por cuarenta y ocho horas, imponiendo el pago de Bs5
000.- (cinco mil bolivianos), supuestamente en cumplimiento a un acta firmada por la Brigada de
Protección a la Familia.

Agrega que, cuando se hizo presente en oficinas de la Brigada de Protección a la Familia a objeto de
interceder por la detención indebida de su representada, afirmó que no existía orden del Juez ni del
Fiscal para proceder a la detención, únicamente hacía cumplir el acta firmada por Lourdes Dionicia
Tórrez y María Ugarte de Hopper.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante, sin citar ninguna norma legal, denuncia la vulneración de su derecho a la libertad.

I.1.3. Petitorio

Solicita se disponga la libertad de su representada, por estar ilegalmente detenida.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 609


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La audiencia pública se realizó el 7 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante de


fs. 8 a 13 vta., produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante asistió a la audiencia acompañado de su representada, haciendo uso de la palabra,


fundamentó que el 6 de febrero de 2012, su defendida en compañía de su enamorado, Jorge
Hopper, fueron detenidos en dependencias de la Brigada de Protección a la Familia, donde se
apersonaron como consecuencia de una riña en la zona de “San Antonio”, encontrándose
presente también María Ugarte de Hopper, madre de Jorge Hopper.

Agregó que, cuando se apersonó a dependencias de dicha institución, con el objeto de


informarse sobre la situación de su defendida, se entrevistó con Heydi Jarro Salvatierra, quien de
manera arbitraria e irrespetuosa, le dijo que no existía orden de detención por parte de la
autoridad judicial ni del Ministerio Público, que permanecería detenida por cuarenta y ocho
horas y debía realizar el pago respectivo. Denunció vulneración de los derechos de su
representada, toda vez que no se puede obligar el cumplimiento de un acta que no cumple con
las formalidades de ley.

Asimismo, señaló que dicha funcionaria, una vez que tuvo conocimiento de la interposición de
la acción de libertad en su contra, llamó al accionante para solicitarle que pase a firmar el acta de
su libertad, tratando de esa forma dar legalidad a la detención indebida.

Por otra parte, el accionante, haciendo uso de la palabra, afirmó que permaneció arrestada desde
las 10:45 hasta las 13:00 horas aproximadamente; y que la funcionaria manifestó que se iba a
dar cumplimiento al acta donde se establecía que permanecería arrestada por cuarenta y ocho
horas y el pago de Bs5 000.- (cinco mil bolivianos).

I.2.2. Informe de la funcionaria demandada

En audiencia, Heydi Jarro Salvatierra, haciendo uso de la palabra, negó haber leído un acta en el
que decía que Lourdes Dionicia Tórrez, estaba arrestada por cuarenta y ocho horas y debía pagar
una multa de Bs5 000.- Asimismo, señaló que la ahora representada, Jorge Hopper y su madre
María Ugarte de Hopper, se hicieron presentes en la Brigada de Protección a la Familia, donde
María Ugarte de Hopper manifestó que su hijo es casado y que cometía un acto de infidelidad,
razón por la que pidió se los arreste y se haga cumplir un acta que se había suscrito
anteriormente.

La funcionaria, señaló también que la representada únicamente permaneció en una de las


habitaciones de esa institución, debido a la agresividad de María Ugarte de Hopper, quien
amenazaba con agredirla físicamente.

El abogado de la funcionaria demandada, haciendo uso de la palabra señaló que en ningún


momento Lourdes Dionicia Tórrez quedó arrestada y que con el objeto de resguardar su
integridad física, se le pidió que pase al dormitorio contiguo. Indicando también que su libertad
se viabilizó a las 14:30 horas, antes de su notificación con la presente acción de libertad.
Afirmó, que en ningún momento quedó incomunicada, no se le vulneró su derecho a la
locomoción por lo que solicita, se dicte el fallo declarando improcedente la acción de libertad.

I.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 610


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Juez de Partido Mixto, Liquidador y de Sentencia de Tupiza, constituido en Juez de garantías,


pronunció la Sentencia 01/2012 de 7 de febrero, cursante de fs. 14 a 15, “concediendo la tutela”
en la acción de libertad formulada contra la funcionaria de la Brigada de Protección a la Familia
de Potosí. Conteniendo el fallo dictado, los siguientes argumentos: a) Lourdes Dionicia Tórrez,
ha sido detenida indebidamente aproximadamente, desde las 10:45 hasta las 13:00 horas del 6 de
febrero de 2012, en dependencias policiales de la Brigada de Protección a la Familia de Potosí
(zona Chajrahuasi); y, b) Heydi Jarro Salvatierra, no ha demostrado que la retención de la
demandante Lourdes Dionicia Tórrez, fuera para protegerla de María Ugarte de Hopper, por lo
que se han violado los derechos a la libertad, estipulado en el art. 23.III, al debido proceso y
derecho a la defensa, arts. 116 y 117 de la Constitución Política del Estado (CPE).

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Acta de denuncia de acción de libertad, interpuesta por Freddy Flores en representación de
Lourdes Dionicia Tórrez contra Heydi Jarro Salvatierra, funcionaria de la Brigada de Protección
a la Familia, denunciando que su representada se encuentra detenida indebidamente, sin ningún
mandamiento emitido por autoridad competente. (fs. 1).

II.2. Cursa acta de audiencia de acción de libertad en el Juzgado de Partido Mixto, Liquidador y
de Sentencia, en la que se estableció que la accionante permaneció detenida en dependencias de
la Brigada de Protección a la Familia aproximadamente por 3 horas. (fs. 8 a 13 vta.).

II.3. Mediante Resolución 01/2012, el Juez de Partido Mixto, Liquidador y de Sentencia,


constituido en juez de garantías, declaró procedente la tutela solicitada. (fs. 14 a 15).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante por su representada, afirma que fue vulnerado su derecho a la libertad, toda vez
que permaneció detenida por una funcionaria de la Brigada de Protección a la Familia,
supuestamente en cumplimiento a un acta que disponía su arresto por cuarenta y ocho horas y el
pago de Bs5 000.- Por lo que, en consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales
argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1.De la naturaleza jurídica y ámbito de aplicación de la acción de libertad.

La Constitución Política del Estado instituye la acción de libertad en su art. 125, que señala:
“Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que
es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad
y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde
tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se
restituya su derecho a la libertad”; norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), que dispone: “Es una acción constitucional
extraordinaria de tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de
los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados”.

Por su naturaleza tutelar, la acción de libertad, tiene la finalidad de proteger de forma inmediata
y efectiva los derechos a la vida y la libertad física en los casos en los que sean ilegal o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 611
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

indebidamente restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión por parte de las


autoridades públicas o particulares.

Acción tutelar cuyas características principales son: El informalismo, por la ausencia de


requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por la urgencia en la protección de
derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite caracterizado por su celeridad; la
generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio, inmunidad ni prerrogativa, y la
inmediación, porque requiere que la autoridad judicial tenga contacto con la persona privada de
libertad.

La Constitución Política del Estado, acentúa algunas de las características anotadas; así por
ejemplo, en el caso del informalismo, contempla la posibilidad de presentación oral de la acción
de libertad, antes reservada sólo para menores de edad, incapacitadas o analfabetas; en el caso de
la inmediación, la norma constitucional prevé que la autoridad judicial, dispondrá que el
accionante sea conducido a su presencia; asimismo, amplía el ámbito de protección, pues la
ahora acción de libertad no se limita a la protección de ese derecho, sino que alcanza al derecho
a la vida, además de la posibilidad de presentarla también contra particulares.

III.2.De las condiciones de validez para la restricción del derecho a la libertad.

El derecho a la libertad, universal y constitucionalmente protegido, sólo puede ser restringido en


los límites señalados por ley. Es así que la Convención Americana sobre Derechos Humanos en
su art. 7.2 establece: “Nadie puede ser privado de su libertad física, salvo por las causas y en las
condiciones fijadas de antemano por las Constituciones Políticas de los Estados partes o por las
leyes dictadas conforme a ellas”; y en su art. 7.3 señala: “Nadie puede ser sometido a detención
o encarcelamiento arbitrarios”. En ese sentido, nuestra Constitución Política del Estado,
establece también las condiciones en las que la libertad puede ser restringida, así el art. 23
establece: “I. Toda persona tiene derecho a la libertad y seguridad personal. La libertad personal
sólo podrá ser restringida en los límites señalados por ley, para asegurar el descubrimiento de la
verdad histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales. II. Nadie podrá ser detenido,
aprehendido o privado de su libertad, salvo en los casos y según las formas establecidas por la
ley. La ejecución del mandamiento requerirá que éste emane de autoridad competente y que sea
emitido por escrito”.

Por lo que, para que una restricción al derecho a la libertad sea constitucional y legalmente
válida, se deben cumplir con determinados requisitos materiales y formales. “SC 2558/2010-R
de 19 de noviembre, respecto a los primeros, sólo se puede restringir el derecho a la libertad en
los casos previstos por ley, que de acuerdo a la Opinión Consultiva (OC) 6/86 de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos debe tratarse de una Ley formal, es decir de aquella que
emana del órgano legislativo. Con relación a los requisitos formales, la restricción al derecho a
la libertad sólo será válida si se respetan las formas establecidas por ley, si el mandamiento
emana de autoridad competente y es emitido por escrito, salvo el caso de flagrancia, de
conformidad a lo establecido por el art. 23. IV de la CPE.

Estas condiciones de validez, también han sido desarrolladas por la jurisprudencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos. Así en la Sentencia de 21 de enero de 1994, caso
Gangaram Panday, la Corte señaló: '…Nadie puede ser privado de la libertad personal sino por
las causas, casos o circunstancias expresamente tipificadas en la ley (aspecto material) pero,
además, con estricta sujeción a los procedimientos objetivamente definidos por la misma
(aspecto formal)´.
(…)

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 612


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En materia penal, los casos en los que una persona puede ser privada de su libertad están
expresamente previstos en el Código Penal, tratándose de sanciones penales, y en el Código de
Procedimiento Penal, tratándose medidas cautelares, entre ellas la detención preventiva”. En
cuanto a las formalidades que deben observarse para la privación de libertad de una persona, las
mismas también se encuentran establecidas en el Código de Procedimiento Penal.

III.3.De las facultades y competencias de la Brigada de Protección a la Familia

La Ley contra la Violencia en la Familia o Doméstica, establece que se entiende por violencia en
la familia o doméstica, la agresión física, psicológica o sexual cometida, por el conviviente,
ascendientes, descendientes, hermanos, parientes civiles o afines en línea directa y colateral,
tutores, curadores o encargados de la custodia.

En su art. 7 determina que los hechos de violencia en la familia o doméstica que no constituyan
delitos tipificados en el Código Penal, serán sancionados con las penas de multa o arresto; y en
su art. 9 dispone que la pena de arresto consiste en la privación de libertad por un plazo que será
fijado por el Juez y que no podrá exceder de cuatro días; disposición concordante con el art. 8
del Decreto Supremo (DS) 25087 que reglamenta la Ley antes señalada, que faculta a las
Brigadas de Protección a la Mujer y la Familia, a socorrer a las personas agredidas aún cuando
se encuentren dentro de un domicilio, sin necesidad de mandamiento ni limitación de hora y día,
con la finalidad de proteger a la víctima y evitar mayores agresiones, además de aprehender a los
agresores y ponerlos a disposición de la autoridad judicial.

En relación a las facultades de la Brigada de Protección a la Familia en temas relativos a la


violencia familiar, la SC 0625/2001-R de 22 de junio, estableció: ”…en casos de denuncias de
violencia familiar, si bien la Brigada de Protección a la Familia es el órgano competente para
realizar la investigación como también para proteger inmediatamente a la victima brindándole
el socorro requerido, dicha facultad no alcanza a ordenar arrestos, pues esta medida sólo es
atribución del juez que conozca la denuncia…” (el subrayado nos corresponde).

III.4. En el caso concreto

En el presente caso, la ahora representada afirma que se apersonó a dependencias de la Brigada


de Protección a la Familia acompañada de su enamorado Jorge Hopper y la madre de éste
último, como consecuencia de una riña acaecida en la zona de “San Antonio”.

Tomando en cuenta el ámbito de aplicación de la Ley de Violencia Familiar o Doméstica y su


Reglamento; no existe vínculo de parentesco entre María Ugarte de Hopper y Lourdes Dionicia
Tórrez, por lo que la Brigada de Protección a la Familia, no es la instancia competente para
conocer este tema, debiéndose en caso de existir la comisión de delitos contra el orden público o
lesiones tipificados en el Código Penal (CP), remitir a la Fuerza Especial de Lucha contra el
Crimen, a objeto que se investigue y se prosiga con el proceso correspondiente.

La funcionaria demandada, manifiesta que únicamente procedió a resguardar la integridad física


de la representada, debido a la agresividad de María Ugarte de Hopper; sin embargo, no es
concebible restringir el derecho a la libertad de una persona a objeto de resguardar su integridad
física, toda vez que existen otros mecanismos legales para resguardar estos derechos.

Al respecto, la Jurisprudencia Constitucional a través de la SC 0314/2002-R de 22 de marzo,


estableció: “…no importa necesariamente que el agraviado deba estar detenido en una celda
policial o carcelaria, pues basta que esté detenido en cualquier otra instalación u oficina por
decisión u orden de un funcionario policial, sin que concurran los presupuestos previstos en el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 613
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

art. 227 referido, y en contra de su voluntad, pues fuera de esos presupuestos toda persona
luego de ser denunciada por la comisión de un delito debe ser citada legalmente conforme a las
normas aplicables al caso…”; así también la misma Sentencia Constitucional señala “…en
casos como el constatado, resulta irrelevante si la detención fue por minutos o pocas horas, de
igual forma implica una detención indebida o ilegal, dado que ninguna autoridad tiene la
facultad para aprehender a una persona sin guardar las formalidades previstas por la
Constitución y las Leyes…” (el subrayado nos corresponde).

En el asunto de examen, resulta aplicable el razonamiento desarrollado en el fundamento


jurídico precedente; toda vez que la detención indebida se dio como consecuencia de aquel acto
por el cual se privó a la representada de su libertad, sin que exista una causa o motivo
establecido por ley y; sin que exista una orden expresa motivada y expedida por autoridad
competente.

En consecuencia, el Juez de garantías al “conceder la acción tutelar”, ha obrado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 01/2012 de 7
de febrero, cursante de fs. 14 a 15, pronunciada por el Juez de Partido Mixto, Liquidador y de
Sentencia de Tupiza del Distrito Judicial de Potosí, y en consecuencia, CONCEDER la tutela
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0102/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Dra. Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00076-2012-01-AAC
Departamento: Pando

En revisión la Resolución de 26 de enero de 2012, cursante de fs. 23 a 24 vta., pronunciada dentro de


la acción de amparo constitucional interpuesto por Noelia Del Carmen Berrios Acuña contra Luis
Adolfo Flores Roberts, Gobernador y Franz Vélez Marubay, Director de Recursos Humanos,
ambos del Gobierno Autónomo del departamento de Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 614


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por memorial presentado el 20 de enero de 2012, cursante de fs. 15 a 16, la accionante expresa
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Refiere que, desde el 11 de enero de 2010 hasta el mes de octubre de 2011, desempeñó el cargo de
Técnico Administrativo de la Dirección de Turismo, dependiente del Gobierno Autónomo de Pando;
asimismo que desde un comienzo hizo conocer su estado de embarazo a la entidad empleadora;
refiere que sus controles ante la Caja Nacional de Salud (CNS) los realizó desde el octavo mes;
posteriormente, el 1 de mayo de 2010 nació su hija, hecho que también fue de conocimiento de la
oficina de Recursos Humanos de la mencionada Gobernación, consecutivamente, en previsión del art.
45. II y V de la Constitución Política del Estado (CPE), mediante notas escritas dirigidas en tres
oportunidades al Director de Recursos Humanos y una cuarta al Gobernador, Luis Adolfo Flores
Roberts, solicitó el pago del subsidio prenatal, subsidio de natalidad y lactancia, pero vanos fueron sus
reclamos, y al contrario, sólo recibió una respuesta que deniega el pago de los beneficios solicitados.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante denuncia la vulneración de sus derechos de pago de subsidio como asignaciones


familiares, prenatal, natalidad y lactancia; a la igualdad de oportunidades, a la vida, a la salud, a
la petición y a la seguridad social, protegidos por la Constitución Política del Estado, sin citar
norma precisa que los contiene.

I.1.3. Petitorio

Solicita se ordene el pago del subsidio como asignaciones familiares, prenatal, natalidad y
lactancia.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

La audiencia pública se realizó el 26 de enero de 2012, a horas 10:00, según consta en el acta
cursante de fs. 21 a 22, produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante, por intermedio de su abogado ratificó los fundamentos de su demanda.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Las autoridades demandadas no presentaron informe y tampoco se presentaron en audiencia a


prestar informe verbal, pese a su legal citación.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de


Pando, constituido en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución de 26 de enero de 2012,
cursante de fs. 23 a 24 vta., concediendo la tutela contra Franz Velez Marubay, Director de
Recursos Humanos del Gobierno Autónomo de Pando; y denegando la tutela con relación a
Luis Adolfo Flores Roberts, Gobernador del referido Departamento, con los siguientes
argumentos: a) La accionante es ex servidora pública de la Gobernación de Pando y por la
documentación presentada goza de los derechos de la asignación familiar de acuerdo a ley; b)
Las solicitudes de pagos de asignación familiares sólo fueron presentados por la accionante al
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 615
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Director de Recursos Humanos de la mencionada institución; c) La última nota de solicitud de


pago es de 16 de enero de 2012, y fue dirigida al Gobernador, cuatro días antes de la acción, en
ese antecedente esta autoridad desconocía los reclamos anteriores efectuada por la accionante,
por lo que con relación a esta última autoridad, no se agoto las vías para el pago de lo
reclamado, existiendo por lo tanto subsidiariedad; y, d) Por los fundamentos expuestos se
evidencia la violación y vulneración de los derechos denunciados por parte del codemandado
Franz Velez Marubay, Director de Recursos Humanos de la mencionada Gobernación.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

II.1. Por memorándum D.RR.HH. 581/2011 de 10 de enero, emitido por el Gobierno Autónomo
de Pando cursante a fs. 3, se comunica a Noelia Del Carmen Berrios Acuña, que ha sido
designada cono Técnico de Turismo dependiente de la Unidad Departamental de Turismo de
acuerdo a lo establecido en contrato.

II.2. A fs. 4, cursa papeleta de pago emitido por el Gobierno Autónomo de Pando a nombre de
Noelia Del Carmen Berrios Acuña, correspondiente al mes de octubre de 2011.

II.3. A fs. 5, cursa certificado de atención prenatal de 12 de abril de 2010, emitido por Edwin
Vaca Guzmán, Ginecólogo Obstetra de la CNS de Pando, certificando a la “Prefectura”, que la
asegurada Noelia del Carmen Berrios Acuña recibe atención médica prenatal desde el octavo
mes de embarazo, otorgándole la habilitación para el subsidio prenatal.

II.4. A fs. 6, cursa certificado de incapacidad temporal de maternidad extendida por la CNS,
donde se da a la accionante baja médica desde 12 de abril al 15 de mayo de 2010.

II.5. A fs. 7, cursa formulario de nacido vivo, emitido por la CNS, certificando que Noelia del
Carmen Berrios Acuña, dio a luz a una niña el 1 de mayo de 2010 en la localidad de Cobija del
departamento de Pando.

II.6. De fs. 9 a 11, cursan tres memoriales dirigidos al Director de Recursos Humanos del
Gobierno Autónomo de Pando, solicitando el pago de los beneficios de natalidad, lactancia y
nacido vivo, presentados el 23 de febrero, 29 de abril y 19 de agosto de 2011, respectivamente.

II.7. A fs.12, cursa oficio D.RR.HH. 108/2011 de 1 de marzo, de respuesta a solicitud de pago
de subsidio de natalidad, lactancia donde el demandado Franz Velez Marubay, Director de
Recursos Humanos del referido Gobierno Autónomo, hace conocer a la accionante que “de
acuerdo a Certificación Presupuestaria U.P. Nº 053/2010, la Gobernación de Pando no tiene
contemplado en el presupuesto de 2011 recursos económicos para el pago de subsidios
familiares para el personal eventual, el mismo será considerado en la Reformulación
Presupuestaria en el mes de junio de 2011”.

II.8. A fs.13 cursa memorial dirigido a Luis Adolfo Flores Roberts, Gobernador del
departamento de Pando presentado el 16 de enero de 2012, solicitando el pago de beneficios de
lactancia.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante sostiene que las autoridades demandadas, vulneraron su derecho a percibir el subsidio
como asignación familiar de prenatal, natalidad y lactancia; a la igualdad de oportunidades; a la vida,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 616
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

a la salud a la petición y a la seguridad social protegidos por la Constitución Política del Estado
(CPE), toda vez que hasta la fecha no le fueron cancelados ni otorgados dichos beneficios. En
consecuencia, corresponde analizar, en revisión, si los argumentos son evidentes a fin de conceder
o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional y su naturaleza jurídica

Esta acción se encuentra establecida en el art. 128 de la CPE, se la instituye como una acción
tutelar de defensa contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución Política del Estado y la ley.

De acuerdo a la disposición constitucional citada, la acción de amparo constitucional es una


acción de defensa de todos los derechos fundamentales y garantías previstas en la Ley
Fundamental, en los Pactos y Tratados sobre derechos humanos ratificados por nuestro Estado
Plurinacional, salvo los derechos a la libertad y a la vida -cuando éste se encuentre vinculados a
la libertad-, que está bajo la protección de una acción específicas como la acción de libertad.

III.2. Abstracción de la subsidiariedad de la acción de amparo constitucional en caso de


mujer embarazada

Respecto a este tema, la SC 0558/2011-R de 29 de abril, ha establecido lo siguiente. “…La


acción de amparo constitucional, como garantía jurisdiccional extraordinaria hace posible la
materialización de los derechos y garantías fundamentales previstos en la Constitución Política
del Estado y las leyes, cuando son restringidos, suprimidos o amenazados por particulares o
funcionarios públicos y siempre que no hubiere otro medio o recurso legal para su protección.
Se activa ante la inexistencia de otras vías, empero, tratándose de resguardar y/o proteger
derechos primarios de la mujer trabajadora embarazada y del ser en gestación, cuya protección
es urgente e inmediata, ante el retiro intempestivo de la fuente laboral que provoca la
suspensión del derecho a la seguridad social que a su vez resguarda y garantiza el derecho a la
salud, poniendo en riesgo el derecho a la vida que no puede estar supeditado al agotamiento
previo de otras vías o instancias legales, es decir, no se sujeta al principio de subsidiariedad,
característica de esta acción, debiendo hacer abstracción del mismo con el fin de tutelar en
forma prioritaria e inmediata los derechos a la vida y a la salud como parte de la maternidad.
En ese entendido, compete ingresar al análisis y resolución del fondo de la problemática
planteada”; en consecuencia, conforme a la Sentencia Constitucional citada, y teniendo en
cuenta que el art. 15 de la CPE, establece que toda persona tiene derecho a la vida, siendo el
mismo un derecho fundamental, en este caso de la mujer en gestación así como de la niña
nacida, no correspondía denegar la tutela de la presente acción respecto al codemandado Luis
Adolfo Flores Roberts, Gobernador del departamento de Pando por el principio de
subsidiariedad, sino por el contrario ingresar al análisis del fondo respecto de la presente acción
y determinar si la autoridad corecurrida también vulneró el derecho de la accionante.

III.3. Marco constitucional y legal sobre la protección de la mujer embarazada

El art. 45. I de la CPE, prevé que “…todas las bolivianas y los bolivianos tienen derecho a
acceder a la seguridad social”, en este fin el parágrafo III del mismo artículo establece que: “El
régimen de seguridad social cubre atención por enfermedad, epidemias y enfermedades
catastróficas; maternidad y paternidad; riesgos profesionales, laborales y riesgos por labores de
campo; discapacidad y necesidades especiales; desempleo y pérdida de empleo; orfandad,
invalidez, viudez, vejez y muerte; vivienda, asignaciones familiares y otras previsiones
sociales…” (el subrayado es nuestro).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 617
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por otro lado el art. 48.VI de la CPE, establece: “Las mujeres no podrán ser discriminadas o
despedidas por su estado civil, situación de embarazo, edad, rasgos físicos o número de hijas o
hijos. Se garantiza la inamovilidad laboral de la mujer en estado de embarazo y de los
progenitores, hasta que la hija o el hijo cumplan un año de edad”.

De lo anotado, se establece que la Constitución Política del Estado, asegura a la mujer


embarazada, al ser en gestación y al hijo nacido, hasta el primer año de su nacimiento, el
derecho a la seguridad social, mismo que comprende también las asignaciones familiares como
la prenatal, natal y lactancia, por estar las mismas íntimamente relacionados con el derecho
fundamental y primario como es la vida de la mujer, el nuevo ser en gestación y la niña nacida
como es el presente caso.

III.4. Marco constitucional sobre la protección del ser en gestación y niño

Debemos partir primero, hablando de los derechos fundamentales, al respecto el art. 15.I de la
CPE que: “Toda persona tiene derecho a la vida”, a su vez en su art. 16.I indica “Toda persona
tiene derecho (…) a la alimentación”.

Por otra, el art. 60 de la misma Norma Fundamental, también establece que; “Es deber del
Estado, la sociedad y la familia garantizar la prioridad del interés superior de la niña, niño y
adolescente, que comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir protección y
socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios públicos y
privados, y el acceso a una administración de justicia pronta, oportuna y con asistencia de
personal especializado”.

Por su parte el art. 13 del Código del Niño, Niña y Adolescente (CNNA), establece que: “Todo
niño, niña y adolescente tiene derecho a la vida y a la salud. El Estado tiene la obligación de
garantizar y proteger estos derechos, implementando políticas sociales, que aseguren
condiciones dignas para su gestación, nacimiento y desarrollo integral “.

De todo lo anotado, se establece que los derechos del ser en gestación y de los niños, están
protegidos por el Estado, toda vez que a través de las normas señaladas, se protegen el interés
superior del niño, niña en su calidad de grupo más vulnerable.

III.5. Derecho a la seguridad social

Respecto a la seguridad social, la SC 1539/2010-R de 11 de octubre, ha establecido lo siguiente:


“El sistema de Seguridad Social, es reformado estructuralmente por Ley 924 de 15 de abril de
1987, que regula la administración de los regímenes del Sistema de Seguridad Social y
establece en su art 4 que el Poder Ejecutivo reglamentará y regulará su ejecución. Así se
pronuncio el DS 21637 de 25 de junio de 1987 que en su art.25 reconoce las prestaciones del
Régimen de Asignaciones Familiares que (serán pagadas, a su cargo y costo, directamente por
los empleadores de los sectores público y privado) que -entre otras- son: a) El subsidio
PRENATAL, consistente en la entrega a la madre gestante asegurada o beneficiaria, de un pago
mensual en dinero o especie, equivalente a un salario mínimo nacional durante los cinco
últimos meses, b) El subsidio de NATALIDAD, por nacimiento de cada hijo un pago mínimo
nacional y, c) El subsidio de LACTANCIA, consistente en la entrega a la madre de productos
lácteos u otros equivalentes a un salario mínimo nacional por cada hijo, durante sus primeros
doce meses de vida”. En antecedente de la Sentencia Constitucional mencionada, se concluye
que el empleador está obligado por ley a cumplir con la mujer trabajadora, a asegurar en el ente
gestor de salud que corresponda, así como también de cumplir con el pago de la asignación
familiar que comprende los subsidios de prenatalidad, natalidad y lactancia.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 618
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.6. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el caso concreto, la accionante ante la falta de pago de la asignación familiar por parte del
empleador, en este caso el Gobierno Autónomo de Pando, solicitó el pago de las asignación
familiar, mediante memoriales dirigidos en tres oportunidades al codemandado Franz Velez
Marubay, Director de Recursos Humanos de la mencionada Gobernación; sin embargo éste,
mediante oficio D.RR.HH. 108/2011, respondió a la ahora accionante refiriendo que la
Gobernación de Pando no tenía contemplado en el presupuesto de la gestión 2011, recursos para
el pago de subsidios familiares para el personal eventual y que el mismo sería considerado en la
reformulación presupuestaria en el mes de junio de 2011; ante tal respuesta, la accionante
mediante memorial solicitó a Luis Adolfo Flores Roberts, Gobernador del departamento de
Pando, el pago de la asignación familiar, misma que fue presentada cuatro días antes de la
presentación de la presente acción, de la que no se sabe si recibió respuesta alguna.

De lo anotado, se tiene que, el codemandado Franz Velez Marubay, Director de Recursos


Humanos de la citada Gobernación, con su respuesta a la solicitud de pago de asignación
familiar de la accionante, cuando señaló que la Gobernación de Pando no tenía contemplado en
el presupuesto 2011, el pago subsidios familiares para el personal eventual y que el mismo sería
considerado en la Reformulación Presupuestaria en el mes de junio de ese año; vulnero el
derecho de la accionante referente a percepción de la asignación familiar consistente en las
lactancias prenatal, natal y lactancia materna, derecho consagrados en el art. 45. I y III de la
CPE, así como los derechos fundamentales de la hija menor de un año como ser el derecho a la
alimentación y a la vida, mismos que también se hallan protegidos por la Constitución Política
del Estado en sus. arts.15.1, 16.I, 60 y 13 del CNNA; en el caso en particular, el empleador al
negar el pago de la asignación familiar a la trabajadora ahora accionante, está yendo contra los
derecho fundamental y primario de su hija menor de un año, toda vez que le está privando del
derecho a la alimentación y por ende el derecho a la vida, mismos que se encuentran protegidos
por el estado a través de la Constitución Política del Estado y el Código del Niña, Niña y
Adolescente.

Con relación al codemandado Luis Adolfo Flores Roberts, Gobernador del departamento de
Pando, no es posible establecer si causo alguna violación de los derechos de la accionante y de
su hija menor de edad; toda vez que la accionante, mediante memorial de 16 de enero de 2012,
solicitó ante dicha autoridad el pago de la asignación familiar, cuatro días antes de la
presentación de la presente acción sin otorgar el tiempo suficiente para emitir su respuesta, por
lo que con relación a la misma se considera que rige el principio de subsidiariedad por no haber
esperado la accionante la respuesta correspondiente.

Por los fundamentos expuestos, el Tribunal de garantías al conceder la tutela de la acción


amparo constitucional con relación a Franz Velez Marubay, Director de Recursos Humanos de
la Gobernación de Pando, y denegar la tutela respecto al codemandado Luis Adolfo Flores
Roberts; Gobernador del departamento de Pando, ha actuado en forma correcta.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Primera Especializada, en virtud de la autoridad


que le confiere el art. 12. 7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional del Estado
Plurinacional de Bolivia, en revisión resuelve: APROBAR la Resolución de 26 de enero de 2012,
cursante de fs. 23 a 24 vta., pronunciada por la Sala Penal y Administrativa del Tribunal
Departamental de Justicia de Pando, y en consecuencia, CONCEDER la tutela en las mismos
términos del Tribunal de garantías.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 619


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0103/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00078-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 60-A/2012 de 28 de enero, cursante de fs. 33 a 34 pronunciada dentro de


la acción de libertad interpuesta por Nicolás Rafael Torrico Mallea contra Octavio Apaza
Elías, Jorge Mateo Lecoña y Marco Antonio Bedoya Huanca, Juez Técnico y Jueces
Ciudadanos respectivamente del Tribunal Tercero de Sentencia de El Alto del Distrito
Judicial de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURIDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 27 de enero de 2012, cursante de fs. 21 a 23, el accionante manifiesta
lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal que se le sigue a instancia del Ministerio Público, el Instituto Nacional de
Reforma Agraria (INRA) y Ana Carina Moscoso Valda contra Nicolás Rafael Torrico Mallea -
ahora accionante-, por la presunta comisión de los delitos de cohecho pasivo y otros, la audiencia
pública de juicio oral instalada el 15 de diciembre de 2011, ante el Tribunal de Sentencia Tercero
de El Alto, fue suspendida por la inasistencia del Fiscal, la acusadora particular y uno de los Jueces
Ciudadanos, con advertencia del Tribunal, que ante una nueva inasistencia se declararía el
abandono de la querella, y respecto a la Fiscal se oficiaría al superior jerárquico con fines
disciplinarios.

El Tribunal de Sentencia dispuso señalar de manera arbitraria audiencias continuadas para el 22 y


23 de diciembre de 2011, sin tener en cuenta su trabajo, al que debe asistir, y no obstante que la
fecha de juicio oral (22 de diciembre) nuevamente fue suspendida por inasistencia del Fiscal, la
acusadora particular y uno de los Jueces Ciudadanos, el Tribunal incumplió la conminatoria
determinada anteriormente en la audiencia de 15 de diciembre de 2011.

Posteriormente, el 23 de diciembre de 2011, el Tribunal que conoce la causa, en audiencia de


forma arbitraria e irregular y sin mayor fundamentación dispuso su declaratoria de rebeldía por
Resolución 110/2011 de 23 de diciembre, emitiendo el mandamiento de aprehensión conforme lo
dispuesto por el art. 89 del Código de Procedimiento Penal (CPP), sin que previamente se le haya
otorgado la oportunidad de adjuntar el certificado médico forense requerido, concediéndole plazo
para la tramitación del mismo.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 620
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Afirma que en la audiencia de 9 de enero de 2012, en la que purgó su rebeldía, el Tribunal de


Sentencia se vio obligado “…ha dejar sin efecto la declaratoria de rebeldía y las demás medidas
que ilegalmente se me dispuso…”, debido a que en la misma presentó un memorial adjuntado el
certificado médico forense que acreditaba cuatro días de impedimento de salud.

Por otra parte alega que interpuso un incidente de recusación el 17 de enero de 2012, contra el
Tribunal Tercero de Sentencia en pleno que fue rechazado in límine.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

El accionante, alega procesamiento indebido e ilegal persecución, citando al efecto el art. 119.II de
la Constitución Política del estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare procedente la acción de libertad y, consecuentemente, se disponga el cese del


procesamiento indebido e ilegal persecución.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 28 de enero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 32, se
produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante, no concurrió a la audiencia de consideración de la acción de libertad


presentada, pese a su legal notificación (fs. 27).

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Por informe escrito cursante a fs. 29 y vta., Octavio Apaza Elías, Juez Técnico del Tribunal
Tercero de Sentencia de El Alto, manifestó lo siguiente: a) En el proceso penal seguido por el
Ministerio Público, el INRA y querella de Ana Carina Moscoso contra Nicolás Rafael Torrico
Mallea, por la presunta comisión de los delitos de estafa, cohecho pasivo propio y beneficio en
razón del cargo, por Resolución 110/2011 de 23 de diciembre, se declaró su rebeldía, a causa de la
constante inasistencia del acusado a las audiencias que fueron señaladas por ese Tribunal en 7, 17
de noviembre y 15, 22 y 23 de diciembre de 2011; b) El Tribunal consideró que el certificado
médico otorgado por el médico particular presentado no era confiable, toda vez que debía presentar
un certificado médico forense; c) Se le rechazó in limine la recusación planteada por el hoy
accionante mediante Resolución 11/2012, por falta de prueba; d) Con relación a la revocatoria de
medidas sustitutivas, no existe determinación alguna, debiendo resolverse esta situación en las
próximas audiencias; e) La acción de libertad por persecución ilegal o procesamiento indebido
procede únicamente cuando está relacionado directamente con la vulneración del derecho a la
libertad y en el caso concreto no existe persecución ilegal “porque no hay mandamiento de
aprehensión vigente, con la purga de la rebeldía se dejó sin efecto” (el subrayado y las negrillas
son añadidas); f) Tampoco existe procesamiento indebido porque tanto la declaratoria de rebeldía
como el rechazo in límine de recusación se encuentra dentro del debido proceso con argumentos de
hecho y derecho.

I.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 621


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Juez Tercero de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, por
Resolución 60-A/2012 de 28 de enero, cursante de fs. 33 a 34, denegó la tutela solicitada, en base a
los siguientes fundamentos: 1) Por informe del Juez codemandado los actos llevados a cabo en la
etapa del juicio se encuentran enmarcados dentro del debido proceso; 2) El mandamiento de
aprehensión que fue expedida por la declaratoria de rebeldía que motivó esta acción de libertad, fue
dejada sin efecto por haberse purgado la rebeldía; 3) La revocatoria de medidas cautelares
solicitada por la representante del Ministerio Público se encuentra pendiente de resolución, por
ende la competencia constitucional no puede interferir en la competencia ordinaria cuando los
actos jurisdiccionales están pendientes; y, 4) El rechazo de recusación in limine y la solicitud de
revocatoria de medidas cautelares se encuentra dentro del marco del debido proceso y la legalidad,
por lo que no existiría indebido procesamiento, menos persecución ilegal.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes se señalan las siguientes conclusiones:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público, el INRA y Ana Carina Moscoso
Valda contra Nicolás Rafael Torrico Mallea -ahora accionante-, por la presunta comisión de los
delitos de estafa, cohecho pasivo propio y beneficio en razón del cargo, en la audiencia pública de
juicio oral instalada el 15 de diciembre de 2011, ante el Tribunal Tercero de Sentencia de El Alto,
no asistieron la parte acusadora, Fiscal y uno de los Jueces Ciudadanos, motivo por el cual el
Presidente del Tribunal conminó a las partes a asistir a las audiencias señaladas bajo prevenciones
de ley (fs. 2 a 3).

II.2. Según acta de audiencia de juicio oral celebrada por el Tribunal Tercero de Sentencia de 22 de
diciembre de 2011, no asistieron los sujetos procesales con excepción del abogado del INRA (fs. 5
y vta).

II.3. Conforme el acta de audiencia de juicio oral de 23 de diciembre de 2011 (fs. 6 a 7 vta.), el
acusado mediante memorial de 22 del mismo mes y año (un día antes de celebrada dicha
audiencia) presentó certificado médico, el que después de haber sido observado en su validez legal
por la fiscal y las partes al no ser refrendado por un médico forense del Instituto de Investigaciones
Forenses (IDIF), la autoridad fiscal solicitó se declare rebelde al accionante; por lo que mediante
Resolución 110/2011 de 23 de diciembre, el Tribunal Tercero de Sentencia declaró su rebeldía,
debido a las reiteradas e injustificadas inasistencias.

II.4. Por memorial presentado el 9 de enero de 2012, el accionante purgó rebeldía ante el Tribunal
Tercero de Sentencia de El Alto (fs. 15 - 16), adjuntando al efecto certificado médico forense de 6
del citado mes y año que acreditaba cuatro días de incapacidad (fs. 19).

II.5 El Juez Técnico del Tribunal Tercero de Sentencia ahora demandado, en su informe de 27 de
enero de 2012, - dentro de la presente acción de libertad-, aseveró que en el caso de examen no
existe persecución ilegal “porque no hay mandamiento de aprehensión vigente, con la purga de
la rebeldía se dejó sin efecto”. (fs. 29 y vta.). Del mismo modo, el accionante, en su demanda
afirmó que en la “audiencia de 9 de enero de 2012, en la que purgó su rebeldía, el Tribunal de
Sentencia “…se ha obligado ha dejar sin efecto la declaratoria de rebeldía y las demás
medidas que ilegalmente se me dispuso…” (fs. 22) (las negrillas y el subrayado son nuestros)

II.6. Mediante memorial de 28 de enero de 2012, el accionante retiró la acción de libertad


planteada (fs. 31). Consta que el 27 del mismo mes y año fue admitida dicha acción por Resolución
003/2012 (fs. 27).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 622


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que, dentro del proceso penal seguido en su contra se e encuentra: i)
Indebidamente perseguido, toda vez que en audiencia de juicio oral, el Tribunal Tercero de
Sentencia dispuso su declaratoria de rebeldía y, a consecuencia de ello, se emitió un mandamiento
de aprehensión en su contra, sin haberle otorgado la oportunidad de adjuntar un certificado médico;
ii) Indebidamente procesado en razón a las reiteradas suspensiones de las audiencias de juicio oral
y el incumplimiento del Tribunal Tercero de Sentencia asumidas en audiencias anteriores y que en
la audiencia suspendida se analizará la revocatoria de las medidas cautelares. En consecuencia,
corresponde determinar en revisión, si se debe conceder o no la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad y supuestos de activación

El art. 125 de la CPE, establece: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las
formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.

De la norma constitucional glosada se tiene que conforme entendió la SCP 0037/2012 de 26 de


marzo:“…debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está diseñada sobre
la base de dos pilares esenciales, el primero referente a su naturaleza procesal y el segundo,
compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que configura el
contenido esencial de esta garantía, es decir, su naturaleza procesal, se establece que se encuentra
revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada por sus
características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e inmediación; procede
contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no reconoce fueros ni
privilegios… Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se
encuentra configurado por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE,
se resumen en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la
libertad física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya procesamiento
indebido; y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida”(el resaltado es añadido).

III.1.1. La persecución ilegal o indebida en la jurisprudencia constitucional y su


configuración actual en la Constitución

En principio, corresponde recordar la jurisprudencia del Tribunal Constitucional desde el año 2000,
respecto a qué debe entenderse por persecución indebida y los presupuestos que deben cumplirse
para que una conducta se acomode a ella.

La SC 0419/2000-R de 2 de mayo, señaló que persecución ilegal o indebida es toda “… acción de


un funcionario público o autoridad judicial que busca, persigue u hostiga a una persona sin que
exista motivo legal alguno y una orden expresa de captura emitida por autoridad competente en
los casos establecidos por ley, o cuando se emite una orden de detención, captura o aprehensión al
margen de los casos previstos por Ley e incumpliendo las formalidades y requisitos establecidos
por ella…”. Entendimiento asumido también en las SSCC 0261/2001-R y 0535/2001-R, entre
otras.

En ese mismo razonamiento, a través de la SC 0036/2007-R de 31 de enero, que a su vez citó el


entendimiento asumido en la SC 0419/2000-R de 2 de mayo, glosada, determinó que, se considera
persecución ilegal o indebida, cuando se dan los siguientes presupuestos: “1) la búsqueda u
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 623
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

hostigamiento a una persona con el fin de privarle de su libertad sin motivo legal o por orden de
una autoridad no competente, y 2) la emisión de una orden de detención, captura o aprehensión al
margen de lo previsto por ley'”.

En ese orden, el Tribunal Constitucional Transitorio, luego de reflexionar sobre la línea


jurisprudencial establecida sobre el tema de la persecución ilegal desde el año 2000, analizó el
mismo a partir de la nueva configuración dogmática en la Constitución Política del Estado de
2009.

Así la SC 0641/2011-R de 3 de mayo, reiterada por la SC 1864/2011-R de 7 de noviembre,


entendió lo siguiente:

“En efecto, bajo el primer cauce configurativo de este presupuesto de activación de la acción de
libertad, se establece que la persecución ilegal o indebida, debe ser entendida como toda acción
ilegal cometida por un funcionario público o un particular, conducta que implica una manifiesta y
evidente persecución, acoso, búsqueda u hostigamiento, sin que exista una justa causa fundada en
derecho, destinada a suprimir, restringir, perturbar o limitar el derecho a la libertad física, la vida
o algún otro derecho estrictamente vinculado a éstos dos últimos; afectaciones que por su
naturaleza, inequívocamente deben ser tuteladas a través de la acción de libertad, aspecto que a la
luz de la tipología de la acción de libertad ya desarrollada por la SC 0044/2010-R de 20 de abril,
se enmarca dentro de lo que en doctrina se conoce como 'Habeas Corpus restringido'. Asimismo,
debe precisarse que el segundo cauce configurativo de la persecución ilegal tutelable a través de
la acción de libertad, está constituido por todo acto que merced a una orden de detención, captura
o aprehensión, que no cumpla con los presupuestos procesales establecidos para su legal emisión,
esté destinada a suprimir, restringir o limitar el derecho a la libertad física o incluso a la vida,
supuestos fácticos que deben ser protegidos a través de la acción de libertad bajo la figura
conocida en doctrina como 'Habeas Corpus preventivo' y desarrollada por la SC 0044/2010-R de
20 de abril entre otras”.

De otro lado, la SC 0021/2011-R de 7 de febrero, en un caso en el que se evidenció que el


accionante no se encontraba detenido debido a que las autoridades demandadas no emitieron
ningún mandamiento de privación de libertad en su contra, señaló que “…se entiende que la
persecución indebida debe verse materializada en actos o acciones que permitan concluir la
existencia de una amenaza a este derecho, en consecuencia, si no se advierte la orden o emisión
de ningún mandamiento que disponga la privación de libertad personal o de locomoción del
actor, no es posible admitir que éste estuviera indebida o ilegalmente perseguido, por cuanto, es
irracional suponer que podría ejecutarse una disposición que no existe ni existió jamás, y en los
hechos, el accionante nunca pudo ni podrá ser objeto de persecución ni hostigamiento”.(las
negrillas son añadidas)

Entendimiento que fue reiterado en la SC 0942/2011-R de 22 de junio, en un caso en el que los


accionantes al momento de la presentación de la acción tutelar gozaban de su derecho a la libertad
irrestricta, pues no existía un mandamiento de aprehensión librado y/o ejecutado en su contra,
Jurisprudencia asumida también en la SC 0238/2011-R 16 de marzo.

III.1.2. El procesamiento indebido y supuestos de activación en la jurisprudencia


constitucional

Respecto al procesamiento indebido y su activación en la acción de libertad, -antes hábeas corpus-,


la jurisprudencia constitucional ha sido reiterada y uniforme desde el año 2004, al señalar que la
protección que brinda esta acción tutelar , no comprende todas las formas en que el mismo puede
ser infringido, sino sólo a aquéllos supuestos en los que está directamente vinculado al derecho a la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 624
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

libertad personal o de locomoción, por operar como causa directa para su restricción o supresión,
quedando los demás supuestos bajo la protección de la acción de amparo constitucional.

Así la SC 1865/2004-R de 1 de diciembre, citando las SSCC 1034/2000-R, 1380/2001-R, 1312/2001-


R, 111/2002-R, 81/2002-R, 397/2002-R, 940/2003-R, 1758/2003-R y 0219/2004-R, 1688/2004-R, entre
otras, entendió que:

“Conforme al orden constitucional y la jurisprudencia glosada, el procesamiento ilegal al que


hace referencia la norma fundamental del país en su art. 18 de la CPE, no es comprensivo de la
garantía del debido proceso, pues ésta encuentra protección en el art. 19 de la CPE, sino de aquel
procesamiento ilegal, es decir sin respaldo alguno en el ordenamiento jurídico, que opera como
causa para la privación de la libertad. Esto con la finalidad de evitar que a través de un
procedimiento arbitrario, se imponga una sanción o condena penal.

De lo dicho se concluye que en los procesos instaurados de acuerdo al ordenamiento jurídico


boliviano, en el sentido del orden constitucional, las lesiones al debido proceso están llamadas a
ser reparadas por los mismos órganos jurisdiccionales que conocen la causa, lo que implica que
quien ha sido objeto de esa lesión, debe pedir la reparación a los jueces y tribunales ordinarios,
asumiendo activamente su rol dentro del proceso, a través de los medios y recursos que prevé la
ley, y sólo agotados éstos, se podrá acudir ante la jurisdicción constitucional a través del recurso
de amparo constitucional, que, como se ha señalado, es el recurso idóneo para precautelar las
lesiones a la garantía del debido proceso; a no ser que se constate que a consecuencia de las
violaciones al debido proceso invocadas, se colocó al recurrente en absoluto estado de
indefensión, lo que no le permitió impugnar los supuestos actos ilegales y que recién tuvo
conocimiento del proceso al momento de la persecución o la privación de la libertad”.

En esa línea, la SC 0619/2005-R de 7 de junio, resumiendo el entendimiento contenido en la


Sentencia Constitucional anteriormente glosada, precisó que: “… a partir de la doctrina
constitucional sentada en la SC 1865/2004-R, de 1 de diciembre, para que la garantía de la
libertad personal o de locomoción pueda ejercerse mediante el recurso de hábeas corpus cuando
se denuncia procesamiento ilegal o indebido deben presentarse, en forma concurrente, los
siguientes presupuestos: a) el acto lesivo, entendido como los actos ilegales, las omisiones
indebidas o las amenazas de la autoridad pública, denunciados, deben estar vinculados con la
libertad por operar como causa directa para su restricción o supresión; b) debe existir absoluto
estado de indefensión, es decir, que el recurrente no tuvo la oportunidad de impugnar los
supuestos actos lesivos dentro del proceso y que recién tuvo conocimiento del mismo al momento
de la persecución o la privación de la libertad”(resaltado añadido).

Dicho entendimiento jurisprudencial, fue asumido de manera uniforme por las SSCC 0012/2010-
R, 0014/2010-R, 0015/2010-R y 0034/2010-R, 00247/2010-R y 1485/2011-R, entre muchas otras,
a partir de su contrastación con el nuevo texto constitucional.

III.2. Sobre la oportunidad procesal para el retiro de la acción de libertad

III.2.1. En la jurisprudencia constitucional

La Constitución Política del Estado y la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional no


establecen una regla procesal explícita respecto al retiro o desistimiento de la acción de libertad,
regla que ha sido construida jurisprudencialmente por el Tribunal Constitucional anterior y
modulada por el Tribunal Constitucional Transitorio, respecto a la oportunidad procesal para retirar
o desistir la acción de libertad, que corresponde glosar a efectos de establecer la línea
jurisprudencial desde y conforme a la Constitución.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 625
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En efecto, mirando las subreglas jurisprudenciales sobre el tema se tienen las siguientes:

1) El Tribunal Constitucional anterior, en el marco de la Constitución Política del Estado abrogada,


primero, no admitió el retiro ni el desistimiento del recurso de habeas corpus -ahora acción
de libertad-.

En ese razonamiento está la SC 0188/2004-R de 9 de febrero, que a su vez citó la SC 0929/2003-R


de 3 de julio, asumiendo la línea jurisprudencial de otras sentencias, señaló: “…Conviene recordar
por una parte que, por SSCC 0101/1999-R, 0517/2000-R, 0307/2001-R, 0813/2001-R, 1140/2001-
R y otras, han establecido que, (…) '...en materia de hábeas corpus se precautela uno de los bienes
jurídicos más preciados del ser humano, cual es: la libertad, en razón de que no puede admitirse
el desistimiento, sino que, necesariamente debe ingresarse al análisis de la demanda, el informe
de la autoridad recurrida y los actuados producidos en el proceso...', criterio que también debe
ser aplicado en caso de retiro de la demanda”.

2) Posteriormente el Tribunal Constitucional, admitió el retiro y desistimiento del recurso de


hábeas corpus -ahora acción de libertad- empero delimitó la oportunidad procesal para retirar
o desistir, señalando que ello no procedía después de “admitido” el recurso.

En ese sentido está la SC 0031/2005-R de 10 de enero, refiere que: “… respecto al memorial de


desistimiento y retiro del recurso (…) es preciso recordar que por previsión expresa del art. 18.III
de la CPE, en ningún caso podrá suspenderse la audiencia de hábeas corpus; en cuyo mérito, una
vez admitido el recurso y señalada la audiencia, ésta no puede ser suspendida, en atención a la
naturaleza de los derechos que se encuentran bajo protección del recurso, y por lo mismo, no es
posible dar curso al desistimiento o retiro del recurso de hábeas corpus, una vez admitido el
mismo, conforme ha establecido la jurisprudencia desarrollada por el Tribunal Constitucional, en
las SSCC 188/2004-R, 1597/2004-R, entre otras, en las que se determinó, que el juez o tribunal
que conozca el recurso, aún en el caso de presentarse desistimiento o retiro de la demanda, antes
o después de citarse a la parte recurrida, debe conocer el recurso, analizarlo y resolverlo en una
de las formas establecidas en la Constitución y la Ley del Tribunal Constitucional”.

3) Posteriormente, el Tribunal Constitucional Transitorio respecto al retiro o desistimiento de la


demanda de acción de libertad, en las SSCC 1425/2011-R y 1229/2010-R establecieron que si la
lesión de los derechos del accionante -dentro del ámbito de la acción de libertad- habían cesado, o
lo que es lo mismo, la lesión había sido reparada, se aceptaba el desistimiento o retiro de la acción,
en el entendido que el accionante ya no estaba privado de libertad, es decir, estas Sentencias
Constitucionales, ampliaron restrictivamente la oportunidad procesal condicionada a la
cesación del acto lesivo objeto de protección en la acción de libertad.

III.2.2. La oportunidad procesal para el retiro de la acción de libertad conforme a la


Constitución Política del Estado

Conforme las normas constitucionales que disciplinan la acción de libertad (art. 125 y ss.
de la CPE), la única oportunidad procesal para desistir o retirar la acción de libertad, es
hasta antes de señalado el día y hora de la audiencia pública, es decir, cualesquiera de estas
actuaciones (retiro o desistimiento) serán inadmisibles después de esta actuación procesal
(señalamiento de día y hora de audiencia pública) por las siguientes razones:

a) De orden procesal. Existe mandato constitucional expreso respecto al procedimiento al que


debe sujetarse el juez o tribunal de garantías. Tiene el deber de señalar de inmediato día y
hora de la audiencia pública, la que tendrá lugar dentro de las veinticuatro horas de interpuesta
la acción (art. 126.I de la CPE), y -después de cumplidas las formalidades procesales- ésta (la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 626
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

audiencia pública) no puede suspenderse en ningún caso (art. 126.II de la CPE), por lo
mismo, tiene la obligación de dictar sentencia en el fondo, incluso bajo responsabilidad (art.
126.III de la CPE), último aspecto que el legislador constituyente ha decidido incidir -a
diferencia de la Constitución abrogada-.

b) De orden sustantivo. La Norma fundamental, establece y regula el procedimiento antes


mencionado con mandatos expresos al juez o tribunal de garantías incluso bajo responsabilidad
no como un fin en sí mismo, sino en razón a que la justicia constitucional a través de la acción
de libertad se activa para proteger derechos subjetivos (disponibles) y además derechos en su
dimensión objetiva, es decir, busca evitar la reiteración de conductas reñidas contra el orden
público constitucional y los bienes constitucionales protegidos de tutela reforzada.

De otro lado, corresponde aclarar que dada la configuración del proceso constitucional de la
acción de libertad, a diferencia del resto de acciones de defensa, por los bienes constitucionales
protegidos y tutelados, no existe una etapa de admisibilidad, por cuanto el juez o tribunal de
garantías, precisamente en razón al principio de informalidad acentuado en el texto constitucional
(art. 125 de la CPE), no está obligado a examinar requisitos de forma y fondo como ocurre con el
resto de las acciones de defensa. De ahí que está compelido a indicar directamente día y hora de la
audiencia (art. 126.I de la CPE). Por lo que, en un uso correcto de la denominación de los actos
procesales en la acción de libertad, no es adecuado sostener que existe una etapa de admisión.
El razonamiento jurídico de esta Sentencia Constitucional Plurinacional, contenido en el
Fundamento Jurídico III.2.2 constituye la línea jurisprudencial que debe seguirse respecto a la
oportunidad procesal para considerar el retiro o desistimiento de la acción de libertad.

En cuyo mérito, se cambia el razonamiento jurídico contenido en las SC 1229/2010-R de 13 de


septiembre, reiterada por la SC 1425/2011-R de 10 de octubre.

En el caso presente, el accionante, por memorial de 28 de enero de 2012, presentó retiro de la


acción de libertad (fs. 31) ante el Juez de garantías alegando que no pudo obtener el total de las
copias legalizadas para sustentar su acción de libertad, retirando su acción tutelar, no obstante, el
27 del citado mes y año, ya se había notificado al accionante y a la parte demandada, con el auto
que fija la audiencia 003/2012 (fs. 27), es decir retiró su acción, el mismo día de la audiencia
pública, o lo que es lo mismo después de su señalamiento, cuando conforme se precisó
anteriormente (Fundamento Jurídico III.2.2) la única oportunidad procesal para desistir o retirar
la acción de libertad, es hasta antes de fijado el día y hora de la audiencia pública, por lo que el
Juez de garantías obró correctamente al haber celebrado la audiencia e ingresado al
análisis del fondo del problema jurídico.

III.3. Análisis del caso

III.3.1. Respecto a la persecución indebida

En la problemática planteada, se evidencia que dentro del proceso penal seguido por el Ministerio
Público y el INRA a querella de Ana Carina Moscoso contra Nicolás Rafael Torrico Mallea -ahora
accionante- por la presunta comisión de los delitos de estafa, cohecho pasivo propio y beneficio en
razón del cargo, el Tribunal Tercero de Sentencia en la audiencia de juicio oral de 23 de diciembre
de 2011, mediante Resolución 110/2011 de la misma fecha, previa solicitud de la Fiscal declaró la
rebeldía del acusado debido a las reiteradas e injustificadas inasistencias; empero, en razón a que el
9 de enero de 2012, el accionante purgó su rebeldía adjuntando al efecto certificado médico forense
de 6 de enero de 2012, que acreditaba cuatro días de incapacidad (Conclusión II.4) se dejó sin
efecto el mandamiento de aprehensión librado a consecuencia de la aplicación de la norma
contenida en el art. 91 del CPP que señala: “Cuando el rebelde comparece o sea, puesto a
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 627
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

disposición de la autoridad que lo requiera, el proceso continuará su trámite dejándose sin efecto
las órdenes dispuestas a efectos de su comparecencia…”.

En efecto, así lo aseveró el Juez Técnico del Tribunal Tercero de Sentencia -ahora demandado- en su
informe de 27 de enero de 2012, dentro de la presente acción de libertad, declarando expresamente:
“…no hay mandamiento de aprehensión vigente, con la purga de la rebeldía se dejó sin efecto”. (fs.
29 y vta.) y lo afirmó de igual forma el accionante, en su demanda, indicando que en la audiencia de 9 de
enero de 2012, en la que purgó su rebeldía, el Tribunal de Sentencia “…se ha obligado ha dejar sin
efecto la declaratoria de rebeldía y las demás medidas que ilegalmente se me dispuso…” (fs. 22)
(Conclusión II.5).

Esta situación significa que al haberse dejado sin efecto el mandamiento de aprehensión contra el
acusado, como emergencia de que éste purgó su rebeldía justificando su inasistencia a la audiencia
de juicio oral con el certificado médico forense que acreditó cuadro días de impedimento en razón
a su salud y que éste continuaba asumiendo defensa en libertad en el proceso señalado, no existe
ningún acto que implique persecución indebida, por cuanto, conforme la línea jurisprudencial
constitucional uniforme glosada en el Fundamento Jurídico III.1.1 entre otras por la SC 0021/2011-
R de 7 de febrero, reiterada por las SSCC 0942/2011-R y 0238/2011-R, para que se active el
ámbito de protección de la acción de libertad por persecución indebida “debe verse materializada
en actos o acciones que permitan concluir la existencia de una amenaza a este derecho, en
consecuencia, si no se advierte la orden o emisión de ningún mandamiento que disponga la
privación de libertad personal o de locomoción del actor, no es posible admitir que éste estuviera
indebida o ilegalmente perseguido, por cuanto, es irracional suponer que podría ejecutarse una
disposición que no existe ni existió jamás, y en los hechos, el accionante nunca pudo ni podrá ser
objeto de persecución ni hostigamiento”.

III.3.2. Respecto al procesamiento indebido y su activación en la acción de libertad

El accionante, también alega estar indebidamente procesado en razón a las reiteradas suspensiones
de las audiencias de juicio oral y el incumplimiento del Tribunal Tercero de Sentencia de sus
propias determinaciones asumidas en audiencias anteriores respecto a la inconcurrencia de la Fiscal
asignada a la audiencia de juicio con fines disciplinarios, al no haber dispuesto el abandono de
querella, ordenar audiencias de manera continuada al existir una recusación que fue rechazada in
limine, y al hecho de que en la audiencia suspendida se analizaría la revocatoria de las medidas
cautelares; sin embargo, de lo mencionado se tiene que la acción de libertad y el supuesto
procesamiento indebido sólo se puede tutelar cuando el acto lesivo sea la causa directa para la
restricción o privación del derecho a la libertad y exista estado absoluto de indefensión y que debe
presentarse de manera concurrente, es decir, que supuestas lesiones vinculadas al debido proceso
deben ser reparadas por los jueces y tribunales ordinarios que conocen la causa a través de los
medios o recursos que le franquea la ley, y que agotados estos, deberán acudir a la jurisdicción
constitucional a través de la acción de amparo constitucional.

En consecuencia el Juez de garantías, al denegar la acción tutelar respecto del Juez Tercero de
Instrucción en lo Penal de El Alto, ha actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de las atribuciones que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve: APROBAR la Resolución 60-A/2012
de 28 de enero, que cursa de fs. 33 a 34, dictada por el Juez Tercero de Instrucción en lo Penal del
Tribunal Departamental de Justicia de La Paz; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 628
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0104/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag.Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00148-2012-01-AAC
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución de 9 de febrero de 2012, cursante de fs. 787 a 790 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Henry Gonzalo García Canelas
en representación de Rubén Aldo Saavedra Soto, Ministro de Defensa Nacional contra
Víctor Hugo Rojas Sánchez, Juez Segundo de Partido y de Sentencia de Montero del
Distrito Judicial de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 4 de enero de 2012, cursante de fs. 729 a 742 vta., el accionante
expuso los siguientes fundamentos:

I.1.1. Fundamentos de hecho que motivan la acción

El 4 de noviembre de 2008, el representado del accionante interpuso demanda de interdicto de


recobrar la posesión sobre el fundo rústico “Guabirá”, contra Santiago Valenzuela Arévalo,
Carmelo Román Justiniano, Freddy Delgadillo Jordán, Edwin Tupa Tupa, Humberto Ignacio
Céspedes, Gladys Ortiz Arias, Miguel Castro Ortíz, Freddy, Íver y María Paraba de Masabi,
Eduardo Vaca Díaz, Ciro Campos, Celestino Vaca Bejarano, María Cruz Méndez Masabí y
Edita Aguilera Monasterio, demanda que por Sentencia de 14 de abril de 2009, dictada por la
Jueza Segunda de Instrucción Mixta de Montero, Ana Gloria Rojas Flores fue declarada
probada.

Interpuestos los recursos de apelación contra la referida Sentencia por Edwin Tupa Tupa y
Humberto Ignacio Céspedes, el 14 y 26 de mayo de 2009, respectivamente, estos fueron
concedidos en efecto devolutivo, remitiéndose por ello el 3 de julio del mismo año, el
expediente original ante la Jueza de Partido de las provincias Obispo Santiestevan y Warnes,
Consuelo Caballero Leytón, autoridad que se excusó de conocer los mismos, enviando el
proceso al Juez Segundo de Partido y de Sentencia de Montero, Víctor Hugo Rojas Sánchez,
quien mediante Auto de 21 de julio de ese año, con la finalidad de conservar la imparcialidad, de
oficio también se excusó. Lo propio sucedió con el Juez Tercero de Partido y de Sentencia de
Montero, remitiendo por tal razón el expediente su similar del Juzgado de Portachuelo, José
Gambarte Pizarro, el cual, por Auto de Vista de 7 de septiembre de 2009, anuló obrados hasta
“fs. 41” inclusive (del expediente original).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 629
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Devuelto el expediente al Juzgado de origen y subsanadas las actuaciones que causaron la


nulidad de obrados, mediante Sentencia 31/2010 de 19 de abril, se declaró probada la demanda
de recobrar la posesión del fundo rústico “Guabirá”. Remitidos los recursos de apelación,
llegaron ante el Juez Tercero de Partido donde Víctor Hugo Rojas Sánchez, en suplencia legal
emitió el Auto de Vista de 23 de noviembre de 2011, anulando obrados hasta fs. “40” inclusive
(del expediente original).

Sustentando su competencia, bajo el criterio de que su excusa de 21 de julio de 2009, fue


anulada por el Auto de Vista de 7 de noviembre del mismo año. Tales actuados y de manera
específica el Auto de 23 de noviembre de 2011, afecta los derechos de su mandante al debido
proceso, al juez natural en sus elementos del juez independiente e imparcial, a la justicia pronta,
oportuna, transparente y sin dilaciones y a la “seguridad jurídica”, puesto que, con anterioridad
el mismo Juez al dictar el Auto de 21 de julio de 2009, afirmó que se apartaba del conocimiento
del recurso de apelación “a fines de conservar la imparcialidad dentro del proceso”; en tal
sentido, de conformidad al art. 4.II de la Ley de Abreviación Procesal Civil y Asistencia
Familiar (LAPCAF), el Juez quedó inhibido definitivamente de conocer dicha causa.

Por todo ello, el accionante acude a la vía de la acción del amparo constitucional, al estar el tema
de las excusas íntimamente relacionado con la independencia e imparcialidad como elementos
integrantes del juez natural y por ende del debido proceso

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima que se lesionaron los derechos del Ministerio que representa al debido
proceso, al juez natural en sus elementos del juez independiente e imparcial, a la justicia pronta,
oportuna, transparente y sin dilaciones y a la “seguridad jurídica”, citando al efecto los arts. 115.
I y II, 120.I y 178.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita que se declare nulo el Auto de Vista de 23 de noviembre de 2011,


ordenando al Juez demandado dicte nueva resolución en base a lo establecido por el art. 4.I y II
de la LAPCAF y se condene al pago de daños y perjuicios a favor del Ministerio de Defensa.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Recibida la acción el 4 de enero de 2012, por la Sala Civil Segunda del Tribunal Departamental
de Justicia de Santa Cruz, mediante Auto de 6 del citado mes y año declinó competencia en
razón de que el lugar donde se dictó la Resolución considerada ilegal es la ciudad de Montero
(fs. 743 y vta.), remitiendo por ello la acción al Juez de Partido Mixto de Montero (fs. 745).

Admitida la acción el 16 de enero de 2012, conforme al informe brindado por el Secretario del
Juzgado Tercero de Partido y de Sentencia de Montero, Renán Ribera Arancibia, se señaló
audiencia para el jueves 2 de febrero de 2012, la cual no se llevó a cabo por los hechos
generados por una multitud que amedrentaba la realización de la misma. Por tal razón, y con
anuencia de las partes se señaló como nueva fecha para la audiencia el 3 de febrero del señalado
año a horas 8:00, pero nuevamente fue interrumpida, puesto que la multitud tomó el acceso al
inmueble judicial, dándose enfrentamientos con funcionarios policiales (fs. 756 y vta.).

Celebrada la audiencia pública el 9 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
779 a 786, en presencia del accionante, del abogado del tercero interesado Edwin Tupa Tupa;

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 630


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ausente el demandado y el representante del Ministerio Público, se produjeron los siguientes


actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la demanda

Germán Cardona, abogado del Ministerio de Defensa, ratificó la demanda, señalando además
que: a) Mediante Auto de 6 de enero de 2012, la Sala Civil Segunda del Tribunal Departamental de
Justicia de Santa Cruz, declinó competencia, ocasionando retardación de justicia; b) Si bien el Juez
ahora demandado dictó el Auto de Vista de 23 de noviembre de 2011, en suplencia legal, cabe aclarar
que los actos son personalísimos; por tanto, la función jurisdiccional es indelegable, conllevando a la
debida responsabilidad; y, c) La acción no se interpone contra el cargo sino contra el Juez.

En la réplica, manifestó: 1) De acuerdo a lo previsto por el art. 8.II de la LAPCAF, la actuación


del Juez demandado del 23 de noviembre de 2011, no era la primera por lo tanto estaba
impedido de recusar, siendo la primera actuación el 21 de julio de 2009; 2) Por otra parte, el
Auto impugnado, no era un mero decreto, ni un auto interlocutorio, era un Auto de Vista en
ejecución de sentencia dentro de un interdicto de recobrar la posesión, por tanto no admitía
recurso ulterior; y, 3) En cuanto a la supuesta insuficiencia del poder, y que el mismo no otorga
facultades para demandar a terceros interesados aclaró que éstos no son parte del proceso pero
fueron notificados con “este acto constitucional”, por todos esos motivos pidió se conceda la
tutela solicitada.

Por su parte, el accionante Henry Gonzalo García Canelas, en audiencia indicó que el Juez
demandado se excusó por su propia voluntad, puesto que ponía en riesgo el principio de
imparcialidad en sus decisiones; por ello, resulta una interpretación errada el creer que por
haberse anulado obrados está habilitado para retomar el proceso resolviendo los incidentes de
nulidad, vulnerando los principios de independencia e imparcialidad, solicitando en
consecuencia se conceda la tutela de la acción.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Segundo de Partido y de Sentencia de Montero, Víctor Hugo Rojas Sánchez,


presentó informe escrito, cursante a fs. 761 y vta., señalando que: i) Como resultado de ejercer
suplencia en el Juzgado Tercero de Partido y de Sentencia de Montero, donde radicaron dos
recursos de apelación contra Autos dictados por el Juez de Instrucción de la localidad de
Mineros, previa notificación de las partes, dictó el Auto de Vista de 23 de noviembre de 2011;
ii) El petitorio de la acción de amparo constitucional es impropio puesto que pide se declare nulo
el Auto impugnado y se ordene al Juez demandado dictar un nuevo auto, lo que resulta
incongruente puesto que mientras no haya un impedimento del Juez Tercero de Partido y de
Sentencia, no podrá volver a tener jurisdicción y competencia en dicho Tribunal, aspecto que
hace la improcedencia de la acción, debiendo haber sido rechazado in límine.

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

Sergio Pedraza Domínguez, abogado de Edwin Tupa Tupa, presentó memorial de incidente
de vicios procesales que afectan a la competencia del Juez Tercero de Partido Mixto y de
Sentencia de Montero como juez de garantías (fs. 772 a 775 vta.) y en audiencia al respecto
manifestó: i) La actuación del Juez demandado, no fue como Juez Segundo de Partido Mixto de
Montero donde es titular, sino en calidad de suplente legal del Juez Tercero de Partido Mixto; ii)
Debió haberse demandado también al actual Juez Tercero de Partido Mixto y de Sentencia,
quien esta fungiendo como Juez de garantías creando con ello un conflicto de competencia, ya
que vendría a ser juez y parte pues en caso de concederse la tutela tendría que ser quien dicte el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 631
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

nuevo auto de vista; iii) Corresponde corregir procedimiento anulando obrados y declinando
competencia al juzgado siguiente para que conozca la presente acción; y, iv) Por todo ello,
habiendo demostrado el error judicial, el conflicto jurídico relacionado a la competencia y los
efectos que podría provocar, en la vía incidental solicita la corrección de procedimiento ante la
advertencia de un error procesal en la tramitación de la presente acción tutelar, debiendo
anularse obrados hasta la admisión de la demanda, declinar competencia el actual Juez de
garantías. Asimismo, en audiencia se dio lectura al memorial que presentó el 2 de febrero de
2012, cursante de fs. 762 a 770, por el cual señalaba: a) Si la parte accionante consideraba que el
Juez demandado estaba comprendido en una de las causales de excusa previstas en el art. 3 de la
LAPCAF, tenía la facultad recusarlo, situación que ahora no es subsanable mediante la acción
de amparo constitucional; b) El accionante pudo presentar incidente de nulidad de obrados si
consideraba que se lesionó su derecho al debido proceso; c) Por el hecho de no haber interpuesto
recusación ni incidente de nulidad, existió acto consentido de conformidad a lo señalado por el
art. 74.2 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), demostrando una
aceptación tácita de los mismos; d) La inexistencia de legitimación activa al no existir agravio
directo como también de legitimación pasiva por no haberse demandado al actual titular del
Juzgado donde se pronunció el Auto impugnado; e) El petitorio de la demanda es ambiguo
puesto que si bien pide la nulidad del Auto de Vista impugnado por incompetencia, también pide
que el Juez demandado dicte un nuevo auto, con lo que no se estaría cumpliendo con lo previsto
por el art. 77.6 de la LTCP; f) No existe acto ilegal, puesto que la excusa ya no tiene validez, en
razón a que se anularon obrados hasta fs. 41 inclusive, además que la misma no fue a instancia
de parte sino de oficio por una situación particular del juzgador que después de la nulidad de
obrados despareció; g) La acción de amparo constitucional tiene por finalidad proteger derechos
fundamentales, no principios constitucionales no ameritando la tutela solicitada
equivocadamente; y, h) Por todo lo señalado pide se declare la improcedencia de la acción
puesto que existen cantidad de argumentos por demás para ello; no obstante, solicitó se deniegue
la tutela solicitada y sea con costas.

René Quispe, abogado de Santiago Valenzuela Arévalo, en audiencia argumentó que: 1) El


testimonio 359/2011 de 23 de febrero, otorgado a favor del accionante para continuar hasta
finalizar la demanda de interdicto de recobrar la posesión y posterior interposición de la presente
acción tutelar, es insuficiente puesto que no son mencionados todos los terceros interesados, ni
se cumplió con lo establecido por los arts. 809 y 810 del Código Civil (CC) y 62 del Código de
Procedimiento Civil (CPC), que al respecto señalan que cuando una persona se presenta a juicio
en representación de otra debe acompañar un testimonio poder que señale en qué casos
intervendrá, que contenga una individualización necesaria, de ello se tiene que el poder
presentado por el accionante es insuficiente, por consiguiente la acción debió ser rechazada in
límine,; 2) La excusa del Juez demandado es ilegal por cuanto se baso en una causal no aplicable
al caso, que además debió ir en consulta; 3) La parte accionante pudo haber recusado al Juez
demandado, en el término de tres días; y, 4) En mérito a los fundamentos expuesto solicitó se
deniegue la acción, puesto que la misma no está prevista para subsanar la negligencia de las
partes.

I.2.3. Resolución

El Juez Tercero de Partido y de Sentencia de Montero, Carlos Barrientos Castro, por Resolución
de 9 de febrero de 2012, cursante de fs. 787 a 790 vta., concedió la tutela, dejando sin efecto
jurídico el Auto de Vista de 23 de noviembre de 2011, pronunciado por el Juez demandado,
ordenándose que todos los actuados del proceso del interdicto de recobrar la posesión pasen al
Juez competente llamado por ley que no se hubiera excusado o que no haya tenido alguna
relación jurídica con el mencionado proceso, es decir, al Juez Primero de Partido y de Sentencia
de Montero, sin calificarse las costas procesales por ser excusable la posición del Juzgador
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 632
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

demandado. Como argumentos señaló: i) El Juez demandado al haberse excusado mediante


Resolución de 21 de julio de 2009, ya no podía más conocer el proceso ni en su caso dictar
ninguna resolución; ii) Al dictar el Auto impugnado, la autoridad demandada vulneró el debido
proceso en sus elementos del juez natural, competente, independiente e imparcial, así como
también la tutela judicial efectiva, puesto que su intervención pone en duda su posición de
objetividad, su interés o relación personal con el problema; iii) Las causales de excusa o
recusación no pueden ir dirigidas al cargo del funcionario jurisdiccional, si no a la persona o
funcionario por su relación con las partes o por motivos que limitan su competencia y accionar
en el proceso concreto; iv) En cuanto a la subsidiariedad ésta se aplicará cuando la ley establece
un procedimiento o recurso que puede modificar la resolución impugnada, la subsidiariedad no
abarca aspectos que vayan dirigidos a las partes al Juez o procedimientos secundarios que
puedan promoverse dentro de un proceso; v) La parte accionante tiene la legitimación activa
puesto que se vio afectada con el Auto impugnado dictado después de haberse excusado el Juez
demandado, quien a su vez cuenta con legitimación pasiva, por ser quien pronunció el referido
Auto a pesar de estar excusado; vi) La excusa no fue observada quedando por ello el Juez
demando inhibido definitivamente el Juez demandado de conocer la causa; y, vii) Que el poder
859/2011 otorgado a favor del accionante es amplio, especial, bastante y suficiente para que se
apersone, siga acciones de amparo constitucional, sin que a falta de cláusula expresa sea tachado
de insuficiente, por ello se admitió la presente acción.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. En ejecución de sentencia dentro del interdicto de recobrar la posesión del terreno
denominado “Guabirá”, fueron presentados recursos de apelación que fueron concedidos en
efecto devolutivo (fs. 115), remitiéndose el proceso al Juez Segundo de Partido y de Sentencia
de Montero, Víctor Hugo Rojas Sánchez, quien por Auto de Vista 76 de 21 de julio de 2009,
considerando que el abogado de la parte demandada Eduardo Castro Mendoza con anterioridad
ya planteó recusación en su contra y al existir la causal de excusa establecida por el art. 3 inc. 5)
de la LAPCAF, se excusó del conocimiento de la misma (fs. 138). Resolviendo las excusas el
Juez de Partido y de Sentencia de Portachuelo, José Gambarte Pizarro, mediante Auto de Vista
04 de 7 de septiembre de 2009 (fs. 151 a 153 vta.), anuló obrados hasta fs. “41 inclusive” (del
expediente original).

II.2. Devuelto el proceso al Juzgado de origen, mediante Sentencia 31/2010 de 19 de abril,


pronunciada por la Jueza Segunda de Instrucción Mixta de Montero, Ana Gloria Rojas, se
declaró probada la demanda (fs. 229 a 231 vta.).

II.3. En ejecución de la Sentencia 31/2010, los demandados interpusieron incidentes de nulidad


y de obrados (fs. 485 a 489 vta.), oposición a la ejecución de la Sentencia (fs. 509 a 511 vta.), así
como la recusación de la Jueza Segunda de Instrucción Mixta de Montero, situación por la que
se excusó de conocer la causa (fs. 491). Habiendo sido remitido el proceso, al Juez de
Instrucción Mixto de Minero (fs. 514), quien mediante Autos de 26, 27 y 28 de octubre de 2011,
rechazó los incidentes interpuestos (fs. 628 a 633).

II.4. Contra el rechazo de los incidentes Sergio Andrés Pedraza Domínguez en representación de
Edwin Tupa Tupa (fs. 645 a 647 vta.) y Alexander Quiñón Fernández (fs. 665 a 667 vta.),
interpusieron recursos de apelación, lo cuales fueron concedidos en el efecto devolutivo (fs.
685). Siendo resueltos mediante Auto de 23 de noviembre de 2011, pronunciado por el Juez
Segundo de Partido y de Sentencia de Montero, Víctor Hugo Rojas Sánchez, en suplencia legal
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 633
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del juzgado Tercero de Partido y de Sentencia, anulando obrados hasta fs. “40 inclusive” del
expediente original (fs. 719 a 721).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante solicita la tutela de los derechos de su representado al debido proceso,


específicamente juez natural en sus elementos del juez independiente e imparcial, a la justicia
pronta, oportuna, transparente y sin dilaciones y a la “seguridad jurídica”, denunciado que
fueron vulnerados por el Juez demandado, puesto que a pesar de haberse excusado con
anterioridad dentro del proceso de interdicto de recobrar la posesión, en forma posterior, en
suplencia legal, conoció y resolvió recursos de apelación formulados dentro del mismo proceso.
En consecuencia, corresponde en revisión, determinar si se debe otorgar o no la tutela solicitada.

III.1. De la acción de amparo constitucional

Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la presente acción


tutelar elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a esta acción
instituida en el sistema constitucional boliviano; así, la Constitución Política del Estado, en la
Sección II, del Capítulo segundo (Acciones de Defensa) del Título IV (Garantías
Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte (Bases fundamentales del Estado -
derechos, deberes y garantías) ha instituido la acción de amparo constitucional.

En ese marco, el art. 128 establece: “La Acción de Amparo Constitucional tendrá lugar contra
actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley”; a su vez el art. 129.I de la CPE, determina que: “La Acción de
Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre
con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante
cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la
protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados”.

En desarrollo de las normas constitucionales citadas, el art. 73 de la LTCP, de 6 de Julio de


2010, al referirse al objeto de la acción de amparo constitucional, “…tendrá lugar contra actos u
omisiones ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva,
que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías reconocidos
por la Constitución Política del Estado y la ley” y que, al referirse el art. 76 de la citada Ley, con
referencia a la subsidiariedad e inmediatez, “La Acción de Amparo no procederá cuando exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados”.

La mencionada acción es en consecuencia, un mecanismo constitucional por el que la Ley


Suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección cuyo objeto es el
restablecimiento inmediato y efectivo de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados, a través de un procedimiento judicial sencillo, rápido y expedito, frente a
situaciones de lesión provenientes de la acción u omisión de servidores públicos o particulares;
siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para
reparar la lesión producida.

III.2. De las recusaciones y excusas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 634


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En materia procesal civil, el régimen de las recusaciones y excusas se encuentra regulado por la
Ley de Abreviación Procesal Civil y de Asistencia Familiar, cuyo art 2 reforma los Capítulos
IV, V y VI del Título I del Libro Primero del Código de Procedimiento Civil.

En ese orden, la excusa, en general, constituye el medio legal establecido para que una autoridad
jurisdiccional por decisión propia se separe en la primera actuación del conocimiento de un
proceso debido a distintas causas que pudieran afectar la imparcialidad del juzgador. Al
respecto, el art. 3 de la LAPCAF, establece entre las causales de recusación: “5) Tener el juez
enemistad, odio o resentimiento con alguna de las partes, que se manifestaren por hechos
conocidos” ( las negrillas nos corresponde), así como, por su parte, el art. 4 de la citada Ley,
establece la obligación de excusa, determinando que el juez o magistrado comprendido en
cualquiera de las causas de recusación, deberá excusarse de oficio en su primera actuación,
aclarando que la excusa no procede a pedido de parte. Una vez decretada la excusa, el juez o
magistrado quedará inhibido definitivamente de conocer la causa y la remitirá de inmediato al
llamado por ley, aun cuando desaparecieren las causas que la originaron. Por lo que será nulo
todo acto o resolución pronunciada después de la excusa.

En este contexto, la recusación dará lugar a ser presentada cuando la autoridad jurisdiccional no
se excusa a pesar de hallarse comprendido en alguna de las causas señaladas expresamente en la
ley, por lo que, la recusación procederá a pedido de cualquiera de las partes, en la primera
actuación que realicen en el proceso. Si la causal fuere sobreviniente, deberá ser deducida dentro
de los tres días de tenerse conocimiento de su existencia y hasta antes de quedar la causa en
estado de sentencia.

En consecuencia, para que el titular del cargo pueda eximirse de los deberes que le son
inherentes, deberá concurrir alguna de las causas de excusa legalmente previstas, y según
procedimiento previsto al efecto. (Diccionario de Derecho Civil de Miguel Ángel del Arco
Torres y Manuel Pons González).

III.3. Análisis de la problemática planteada

El accionante señala que la autoridad demandada mediante Auto de 21 de Julio de 2009, se


excusó de conocer en grado de apelación, la resolución final pronunciada en el proceso de
interdicto de recobrar posesión; sin embrago, posteriormente, a pesar de haberse excusado,
cuando en ejecución de sentencia tomo conocimiento de otra apelación, resolvió la misma,
determinando la anulación de obrados mediante el Auto ahora impugnado.

En efecto, tal como informan los antecedentes que cursan en el presente caso, el Juez
demandado se excusó de oficio, de conocer la causa en grado de apelación, mediante Auto de 21
de julio de 2009, basándose en al art. 3 inc. 5) de la LAPCAF, puesto que en ese entonces el
Juez arguyó que el abogado patrocinante de Edwin Tupa Tupa (parte demandada dentro del
interdicto de recobrar la posesión), era Eduardo Castro Mendoza, quien en una anterior
oportunidad ya había planteado recusación en su contra; sin embargo, es preciso tomar en cuenta
que por Auto de Vista de 7 de septiembre de 2009, el Juez que resolvió los recursos de apelación
de la Resolución final pronunciada en el interdicto de recobrar la posesión, anuló obrados
hasta fs. 41 inclusive; es decir, hasta el estado de citarse con la demanda.

Subsanadas las causas que establecieron la nulidad de obrados en el interdicto de recobrar la


posesión, se dictó nueva Sentencia declarando probada la demanda, pero, en ejecución de esta,
las partes presentaron apelación contra los Autos que rechazaron sus incidentes; recursos que
fueron remitidos al Juzgado Tercero de Partido y de Sentencia de Montero, donde Víctor Hugo
Rojas Sánchez, Juez Segundo de Partido y de Sentencia de Montero, en suplencia legal,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 635
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pronunció el Auto de Vista ahora impugnado, actuación ésta en la que el Juez no observó
causal de excusa alguna. En dicha actuación, el Juez no incurre en ilegalidad alguna, toda vez
que, por una parte, el inciso 5 de las causales de recusación referido a “Tener el juez enemistad,
odio o resentimiento con alguna de las partes” no tiene aplicación cuando se trata de los
abogados o patrocinantes de las partes, sino, específicamente con relación a las partes, y por
otra, porque al haberse anulado obrados con anterioridad hasta fs. “41” del proceso, la excusa a
la que se refiere el accionante, al estar inserta dentro de los actuados anulados también quedó
anulada.

Al efecto, la jurisprudencia constitucional en un caso donde se trato de separar del conocimiento


de la causa a una autoridad judicial, argumentando como causal de excusa el odio, resentimiento
que tuviera con el abogado patrocinante de una de las partes, estableció lo siguiente:“…con
el argumento de que no se demostró que el Vocal recusado tuviera odio, resentimiento o
animadversión contra las partes en el referido proceso(…)”, resulta aplicable al caso “el Auto
Supremo 060/2005, de 4 de mayo, por el que la Corte Suprema de Justicia dispuso que el
abogado o apoderado no puede ser considerado parte de un proceso civil; por tanto, las
causales de excusa o recusación no proceden cuando no están dirigidas hacia las partes
intervinientes en el proceso” (SC 1150/2006-R de 16 de noviembre) (las negrillas son nuestras).
En tal sentido, incluso la excusa presentada por el Juez demandado en ese entonces, no tenía
sustento legal, ya que el abogado no era parte del proceso.

De lo señalado precedentemente, se concluye que el Juez ahora demandado estaba facultado


para poder emitir el Auto de 23 de noviembre de 2011, razón por la que, de ninguna manera, se
conculcó el derecho al juez natural en sus elementos del juez independiente e imparcial, de la
entidad que representa el representado del accionante. Por otra parte, no obstante de no haberse
fundamentado por parte del accionante la presunta lesión a la justicia pronta, oportuna,
transparente y sin dilaciones, debe tenerse que en el contexto descrito en la demanda y
examinado, al haberse obrado conforme a ley, no hubo dilación alguna atribuible a la autoridad
demandada. Del mismo modo, téngase presente que al no haberse conculcado los derechos
descritos precedentemente, no hubo lesión, de igual manera, al debido proceso y, por lo mismo
no se transgredió la “seguridad jurídica”, que dicho sea de paso, no está configurado como un
derecho; sino como un principio.

Consiguientemente, el Juez de garantías al conceder la tutela, no efectuó una adecuada


compulsa de los antecedentes procesales ni realizó un correcto análisis de esta acción tutelar.

POR TANTO

Por lo expuesto, el Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en


virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de
Bolivia, y el art. 12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución de 9 de
febrero de 2012, cursante de fs. 787 a 790 vta. Pronunciada por el Juez Tercero de Partido y
Sentencia de la provincia Obispo Santistevan del Distrito Judicial de Santa Cruz; y, en
consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional plurinacional.

Fdo. Dr. Efren Choque Capuma .-Magistrado.


Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 636


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0105/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00192-2012-01-AAC
Departamento: Tarija

En revisión la Resolución 02/2012 de 13 de febrero, cursante de fs. 193 a 203 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Mónica Patricia Mealla
Guardia contra Justino Zambrana Cachari y María Lily Morales, Presidente y Oficial
Mayor de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante mediante memorial presentado el 27 de enero de 2012, cursante de fs. 92 a 97 vta.,


y el de subsanación de 7 de febrero del mismo año, corriente a fs. 119 vta. de obrados, refiere
que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Desde octubre del 2010, ingresó a trabajar al Gobierno Municipal de Tarija como Asesora del
despacho del Alcalde; mientras desempeñaba sus funciones de manera continua, en junio del
2011, recibió varias invitaciones y propuestas de trabajo por parte del Presidente de la Asamblea
Legislativa Departamental, con el propósito de formar parte del staff de Asesores Legales de
dicho ente deliberante.

Agrega que, ante la insistencia de éste, así como la oportunidad de poder percibir un salario
mayor, el 26 de julio de 2011, sostuvo una reunión con la autoridad hoy demandada y después
de hacerle conocer de manera verbal y ocular sobre su estado de gravidez aceptó la propuesta,
quién posteriormente le solicitó que en el día debía hacer llegar su carta de renuncia al cargo que
venía desempeñando en la mencionada institución. Bajo estas circunstancias presentó su
renuncia, por lo que el 27 de julio del mismo año, a horas 8:00, se incorporó a trabajar en las
instalaciones de la Asamblea Legislativa Departamental, donde luego de una hora se le hizo la
entrega del memorándum de designación en calidad de Asesora del área jurídica II, firmado por
la Oficial Mayor de la referida Asamblea.

Refiere también, que luego de pedir el espacio e implementos necesarios para la realización de
su trabajo, la Oficial Mayor, María Lily Morales, codemandada, de manera despectiva y
discriminatoria le indicó que la institución no contaba con lo solicitado y que si quería trabajar
debía proporcionarse personalmente; luego, el Presidente de la mencionada Asamblea le solicitó
de muy mala forma que realizará un informe jurídico sobre las solicitudes de permiso del
asambleísta Marcelo Poma, trabajo que a pesar de no contar con los medios necesarios fue
cumplido. Posteriormente la Oficial Mayor, en claro desconocimiento de las funciones de un
abogado, le ordenó de manera verbal la emisión del informe “técnico” que avale la contratación
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 637
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de consultores en línea con fraccionamiento por un problema de presupuesto; a este efecto, le


hizo conocer a la autoridad que no le correspondía informar legalmente lo pedido, sino que
debió solicitar un informe técnico; sin embargo, ante la persistencia de su solicitud, le pidió a la
misma autoridad que dicha instrucción la realizará por escrito, aspecto que le fue negado,
generándole consecuencias en contra de su persona. Sin embargo, para evitar problemas solicitó
documentación para respaldar su opinión legal, la misma que nunca fue proporcionada, tal cual
evidencia por la nota de 28 de julio de 2011, dirigida a la Oficial Mayor.

Manifiesta que al finalizar la tarde del 29 de julio de 2011, le hicieron llegar un memorándum,
cuya finalidad era el de anular o dejar sin efecto su nombramiento y pese haber manifestado que
se encontraba protegida por la inamovilidad laboral en razón de su estado de gravidez, la Oficial
Mayor codemandada, le respondió que el despido era atribución de quien la contrato. Ante esta
situación que tuvo incidencia negativa en su salud (colapso nervioso con diagnóstico placenta
baja), presentó un memorial incoando su reincorporación, la misma que fue respondida de
manera negativa, con el fundamento de que la decisión fue en base a un informe legal de
Oficialía, siendo así notificada el 9 de agosto del mencionado año. Agobiada y sumida en la
incertidumbre sobre el bienestar de su familia presentó una serie de impugnaciones y reclamos
que llegaron incluso a la Directiva de la Asamblea Legislativa Departamental, sin que hasta la
fecha se haya emitido resolución o respuesta alguna sobre su situación.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante estima vulnerados sus derechos a la vida propia y la de su hijo, a la salud, a la


familia, a la seguridad social, a la inamovilidad laboral y a la no discriminación, citando al
efecto los arts. 14.II, 15.I, II y III, 24, 46, 48.I y VI y 49.III de la Constitución Política del
Estado (CPE) y 25.2 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; art. 1 de la Ley 975
de 2 de marzo de 1988; y 86 inc. d) del Decreto Supremo (DS) 29894 de la mencionada Ley.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la presente acción, disponiendo su inmediata restitución de sus derechos


vulnerados y en consecuencia el pago total de sus derechos laborales consistentes en salarios
devengados, subsidios pre y post natal, aguinaldo, multa de acuerdo al instructivo 313 del
Ministerio de Trabajo, más gastos médicos, con imposición de daños, perjuicios y costas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 13 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
189 a 193, de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La accionante, mediante su abogado a tiempo de ratificar en su integridad el memorial de acción


de amparo constitucional, en audiencia, manifestó que: a) Es importante hacer referencia a los
memorándums del 27 de julio y 9 de agosto de 2011; el primero cuyo objeto fue la designación
de su persona como Asesora Jurídica bajo la modalidad de contratación de funcionario público
de libre designación, mediante el cual nació la relación laboral y surgió la inamovilidad
funcionaria por encontrarse en estado de embarazo; y el segundo tiene por objeto declarar nulo
el primer memorándum; b) Si bien la Oficial Mayor, la designó mediante memorándum en su
nuevo cargo, sin embargo, no detenta la facultad de declarar nulo un acto que nació a la vida
jurídica con todas sus formalidades, porque esta atribución la tienen los juzgados y basándose en
el art. 51 y 59.II del Reglamento de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), se entiende
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 638
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que la nulidad no opera de oficio y no puede ser arrogada a una autoridad administrativa, sino
que el acto se presume válido hasta que la nulidad haya sido declarada vía judicial; es decir, que
si bien tenía facultad de prescindir de sus servicios, más no puede hacer de cuenta que esta
relación no existió, porque trabajó tres días realizando informes. Por lo que la intensión “insana”
y arbitraria de fondo es negar la existencia de una relación laboral cuyo efecto es la protección
del derecho de inamovilidad laboral; c) La norma contenida en el art. 48 de la CPE, trae
aparejado un mandato negativo consistente en la no discriminación en razón del embarazo y un
mandato positivo consistente en la inamovilidad funcionaria hasta un año de vida del niño o
niña, mandato constitucional que es de aplicación directa por imperio del art. 109 dada su
jerarquía constitucional; d) Fue llamada por las autoridades demandadas a una reunión para
escucharla y ver si respetaban o no sus derechos, lo cual no tuvo sentido, porque las autoridades
no tienen atribuciones para ello, porque al momento de la contratación se notaba visualmente su
embarazo y por el exceso del trabajo no le dieron tiempo para cumplir con los requisitos previos
ya que su estadía en la fuente laboral fue breve; y, e) El preaviso carece de valor frente a la
necesidad de protección del embarazo y en tres días no puede un funcionario asegurarse, por lo
que hicieron interpretación restrictiva de las normas, correspondiendo tener presente los
principios de proporcionalidad y razonabilidad sobre los requisitos no presentados, así como de
la declaración jurada que son subsanables, habiendo pasado por alto también los principios de
favorabilidad, legalidad, buena fe y seguridad jurídica.

I.2.2. Informe de la autoridad y servidor público demandado

Los demandados, Justino Zambrana Cachari y María Lily Morales, Presidente y Oficial Mayor
de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija, presentaron informe escrito a través de sus
representantes cursante de fs. 175 a 180 vta., señalando: 1) Es evidente que el 26 de junio de
2011, se le hizo la propuesta a la accionante para que asuma el cargo de Asesora Jurídica en la
Directiva de la mencionada institución, otorgándole el tiempo suficiente y necesario (un mes)
para que proceda a tramitar tanto su desvinculación laboral de la Alcaldía de Tarija, como el
trámite de su declaración jurada de bienes y rentas ante la Contraloría General de la República,
para tomar posesión e ingresar a trabajar a la Asamblea Legislativa Departamental; 2) Mediante
memorándum 0141 de 27 de julio de 2011, fue designada en el cargo de Asesora Jurídica de
Directiva, un mes después de la reunión de propuesta de trabajo, la cual a decir de la accionante,
se llevó a cabo el 26 de junio del mencionado año, a partir de ese momento tuvo el tiempo
necesario para dar cumplimiento a lo dispuesto en los arts. 8, 53 y 54 del Estatuto del
Funcionario Público (EFP), que establece como deber de todo funcionario público el presentar
su declaración de bienes y rentas; 3) Los extremos arriba vertidos son corroborrables a partir de
la certificación 01/2011, otorgada por la Directora de Recursos Humanos de la Asamblea
Legislativa Departamental de Tarija, Zulema Irahola Soruco, quien mediante hoja de ruta
0003403, certificó que la accionante no presentó al momento de asumir el cargo la declaración
jurada de bienes y rentas, incumpliendo la normativa citada e incurriendo en el art. 149 del
Código Penal (CP), como el art. 235 de la CPE, en ese sentido a fin de evitar responsabilidades
mayores y perjuicios a la institución como a la accionante, se tomó la certera decisión de
desvincularla, máxime, si de la documentación presentada por la accionante no se observa que
haya cumplido con esta obligación; 4) De acuerdo a la certificación RRHH/ALDT 02/2011,
emitida también por la referida Directora de Recursos Humanos, se demuestra que la accionante
no adjuntó ni presentó certificado médico de embarazo, en tal sentido la institución no tuvo
conocimiento de su estado de gravidez o que acredite dicho extremo, por lo que no se puede
argumentar discriminación por estado de gestación; siendo así, que la accionante una vez que
fue desvinculada de la institución recién hizo saber sobre su estado de gestación, presentando
mediante memorial de 1 de agosto de ese año ante la Asamblea Legislativa Departamental de
Tarija y adjuntando una ecografía de embarazo en fotocopia simple, es decir, fuera de la relación
laboral y cuatro días después de haberse cumplido la misma; y, 5) Ella es personal de libre
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 639
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

nombramiento y por tanto de libre remoción y la demanda de amparo constitucional contiene los
siguientes defectos: No cumple con el principio de inmediatez que indica que esta vía se activa
inmediatamente de haberse producido la lesión, si no hubiera otras vías o de haber agotado las
vías legales ordinarias e idóneas y efectivas; por otro lado, en cuanto al principio de
subsidiariedad, la accionante no tomo en cuenta que dentro del campo administrativo, existen
recursos que necesariamente deben ser agotados antes de pretender acceder a la vía
constitucional. En el caso concreto, la parte accionante no ha agotado la vía administrativa,
puesto que al habérsela negado la reincorporación debió aplicar lo establecido en la Ley de
Procedimiento Administrativo, en tal sentido al no acudir conforme lo establecido la norma
vigente, debe declararse la improcedencia de la acción, señalando al efecto las SSCC
0022/2007-R; 0744/2007-R; 0054/2007-R y 0379/2007-R.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Tarija, constituida en Tribunal
de garantías, por Resolución 02/2012 de 13 de febrero, cursante de fs. 193 a 203 vta., concedió
la acción de amparo constitucional, sin costas por ser demandado el Estado a través de la
Asamblea Legislativa Departamental, ordenando a los demandados procedan a la
reincorporación de su fuente laboral en el plazo de veinticuatro horas, dispongan y hagan el
seguimiento para el pago inmediato de los salarios devengados, aguinaldo, subsidio pre y post
natal, de lactancia y todos los beneficios que le correspondan a la acción como funcionaria
pública desde el momento de su contratación, fundando su Resolución en los siguientes puntos:
i) Los demandados han argumentado que no tuvieron conocimiento del estado de gravidez de la
accionante al momento de la contratación y que ésta no dio aviso formal ni presentó los
requisitos para hacer efectiva la inamovilidad laboral constitucionalmente protegida, al respecto
se debe tomar en cuenta que, la jerarquía normativa de que gozan las normas constitucionales
entre ellas las ya analizadas y que protegen el derecho a la no discriminación, al trabajo y la
inamovilidad laboral de la mujer embarazada que a su vez están relacionados con el derecho a la
vida, la salud, a la familia, a la seguridad social, no pueden subyacer ante la existencia de
normas ordinarias ni administrativas de índole formal, pues éstas están por debajo de aquellas,
siendo los derechos constitucionales de aplicación inmediata conforme lo señala el art. 109 de la
CPE, y que gozan de jerarquía normativa por imperio del art. 410.II de la Ley Fundamental, lo
anotado surge la evidencia de que los derechos constitucionales no pueden ceder ante la
existencia de formalismos legales, por lo que el pre aviso del embarazo referido por los
demandados no tiene relievancia para la jurisdicción constitucional. Al respecto existe
jurisprudencia constitucional de última data como es la SC 1362/2011-R de 30 de septiembre de
2011; ii) Evidentemente no consta en obrados que la accionante hubiera puesto en conocimiento
de la entidad contratante su estado de gravidez y en cuanto a los requisitos previos de
contratación y declaración jurada extrañados, es evidente que no se realizaron, así lo ha
manifestado la propia accionante y se desprende de la revisión del cuerpo de autos; sin embargo,
ni la falta de aviso del estado de gestación, ni el incumplimiento en la presentación de requisitos
formales como los extrañados pueden servir de fundamento para negarle la inamovilidad
funcionaria y la consiguiente reincorporación, pues a momento de hacer sus reclamos la entidad
tomó conocimiento del estado de gravidez de la funcionaria y esta circunstancia es suficiente
para darle un trato especial en razón a que la carta magna así lo dispone en protección de la
mujer embarazada, y aun si en el momento de la contratación no se conocía el estado de
gestación en oportunidad de la representación realizada por la interesada; por ello so pretexto de
desconocimiento de la situación, no puede negarse la reincorporación, toda vez, que la mujer
embarazada está especialmente protegida en el art. 48 de la CPE, cuando establece en sus
parágrafos I y VI, la protección de la estabilidad laboral y la no discriminación ni despido de las
mujeres por situación de embarazo, garantizando a su vez la inamovilidad laboral de las mujeres
en estado de embarazo, normativa que guarda conexitud con lo dispuesto en el art. 25.2 de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 640
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH), que proclama los derechos de la
maternidad y los infantes a cuidados y asistencia especiales; estando además el trabajo como un
derecho protegido por el art. 46 de la misma CPE; iii) Asimismo, la protección a la mujer
embarazada y lactante en cuanto al goce de inamovilidad laboral tiene conexión con el derecho a
la vida, a la salud que están también constitucionalmente protegidos y son inherentes a la
función del Estado de resguardar la vida de sus estantes y habitantes, en especial de la mujer
gestante o en la etapa de lactancia, mediante la inamovilidad laboral que a la vez le permite
cubrir sus propias necesidades básicas del lactante y su familia para una vida digna, tener un
estado de salud física y psicológica ausente de sufrimientos por la preocupación que le ocasione
el estado de inestabilidad económica que podría afectar el desarrollo embrionario y la vida del
niño. Por ello es que al haberse provocado la ruptura del vínculo contractual laboral mediante el
despido se violentó el derecho establecido en el art. 48.I y VI de la CPE, se ha violentado el
derecho a la vida establecido en el art. 15 parágrafo I y dentro de ella al sufrimiento físico y
psicológico garantizados por el parágrafo III, derechos que fueron vulnerados por los
demandados; iv) Asimismo, al haber ordenado el despido y la no reincorporación peticionada
por la accionante, realizaron un acto de discriminación por razón de embarazo, vulnerando el
derecho a la no discriminación por razón de embarazo establecido en el art. 14.II de la Norma
Fundamental; v) En relación al derecho a la seguridad social que alega la accionante, la
contratación laboral trae aparejada como beneficio a favor del trabajador la asistencia médica y
la seguridad social que en el caso de la mujer embarazada reviste especial importancia, pues le
permite tener acceso a los sistemas de atención médica, a los sistemas de seguridad social y a los
subsidios y bonos que el Estado boliviano tiene vigencia para asegurar un óptimo estado de
salud tanto de la madre en gestación o en etapa de lactancia cuanto para el niño o niña en tal
sentido el despido y la no reincorporación le privó de tener acceso a beneficios como funcionaria
pública, por lo que estos actos también configuran vulneraciones al derecho a la salud y
seguridad social previstos por el art. 45.V de la CPE; y, vi) Respecto a los derechos a la no
discriminación y a la inamovilidad laboral y los derechos vinculados descritos anteriormente, la
jurisprudencia constitucional se ha pronunciado de manera vasta, así como la excepción al
carácter subsidiaro del amparo constitucional cuando se trata de trabajadoras embarazadas
(SSCC 0785/2003-R y 0530/2010-R).

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. El 26 de julio de 2011, a horas 15:20, Mónica Patricia Mealla Guardia hoy accionante,
mediante nota dirigida al Alcalde Municipal de Tarija, Oscar Gerardo Montes Barzón, presentó
renuncia irrevocable al cargo de asesora Legal del despacho Municipal (fs. 2).

II.2. A horas 09:00 del 27 de julio de 2011, mediante Memorandum 141, la Oficial Mayor de la
Asamblea Departamental Autónoma de Tarija, María Lily Morales, designó a Mónica Patricia
Mealla Guardia, como Asesora Jurídica (Asesor II) (fs. 3).

II.3. El 27 de julio de 2011, por notas dirigidas a la Oficial Mayor de la Asamblea Legislativa
Departamental María Lily Morales, la hoy accionante solicitó la elaboración de un sello para el
staff de la Directiva, la certificación presupuestaria 2011 para concluir el informe que le fue
solicitado acerca de la procedencia de contrataciones directas y pedido de materiales (fs. 4 a 9
vta.).

II.4. El 28 de julio de 2011, por informe AJD/01/2001, dirigida al Presidente Justino Zambrana
y miembros de la Directiva de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija, la accionante

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 641


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Mónica Patricia Mealla Guardia, presentó informe legal sobre la procedencia de solicitudes de
licencia y alternancia presentada por el Concejal, Marcelo Poma (fs. 10 a 11).

II.5. El 29 de julio de 2011, la Oficial Mayor, María Lily Morales, en mérito a la nota
DESP.PRSDCIA.A.L.D.T.0340/2011-2012, por memorándum 0148, dirigida a la hoy
accionante, resolvió dejar sin efecto el memorándum 0141 de 27 de julio de 2011, por no lograr
adecuarse a la estructura de la institución y a los requerimientos solicitados por sus superiores, el
mismo que se rehusó a recibir en presencia de testigo Freddy Sánchez, con cédula de identidad
1807480 (fs. 12).

II.6. El 2 de agosto de 2011, mediante memorial dirigido al Presidente de la Asamblea


Legislativa Departamental, Justino Zambrana, la hoy accionante solicitó su reincorporación por
despido ilegal e infundada, donde a su vez hizo conocer la discriminación por razón de su estado
de embarazo (fs. 13 a 14) y el 3 de agosto del mismo año, a su vez, mediante nota dirigida a la
misma autoridad la Federación Sindical Única de las Comunidades Campesinas de Tarija, hizo
llegar su repudio por dicho despido y por no tomar en cuenta la inamovilidad laboral de mujer
embarazada, solicitando se enmiende dicho error como su reincorporación inmediata (fs. 15 a
16).

II.7. El 5 de agosto de 2011, mediante nota DESP.PRSDCIA.A.L.D.T. 0382/2011-2012,


dirigida a Mónica Patricia Mealla Guardia, la Oficial Mayor de la Asamblea Legislativa
Departamental de Tarija, invitó a la accionante a participar de una reunión a realizarse el mismo
día a horas 16:00 en instalaciones de Presidencia, con el fin de tratar su caso (fs. 19) y el 9 de
agosto del mismo año, mediante oficio DESP.PRSDCIA.A.L.D.T. 0395/2011-2012, se le hizo
conocer que de acuerdo al informe evaluado por Asesoría de Oficial Mayor 14/2011, que en
ningún momento se tomó conocimiento de su estado por lo que el despido no fue ilegal, por lo
que su designación fue de libre nombramiento y por ese motivo su remoción del cargo obedece a
una atribución propia de quien la designó (fs. 20).

II.8. El 23 de septiembre de 2011, mediante memorial dirigido a la Oficial mayor


Administrativa de la Asamblea Legislativa de Tarija, la accionante, al amparo del art. 24 de la
CPE, pidió el pago de los tres días de salario por el mes de julio y el correspondiente al mes de
agosto del mismo año, más el bono de subsidio de pre natalidad correspondiente a los meses de
agosto y septiembre del mismo año (fs. 21 y vta.); el 7 de diciembre de ese año, solicitó que se
le proporcione fotocopia legalizada del informe 14/2011 de Asesoría de Oficialía Mayor en el
que se fundó la negativa a su reincorporación y la violación a su derecho de inamovilidad
laboral (fs. 22 y vta.).

II.9. El 7 de diciembre de 2011, mediante memorial dirigido a los miembros de la Directiva de


la Asamblea Legislativa de Tarija, la accionante, solicitó analizar su caso, se pronuncien
oficialmente por escrito y se ordene la reincorporación inmediata a su fuente laboral como la
cancelación de sus salarios devengados y el pago retroactivo de subsidio prenatal en efectivo (fs.
23 a 24 vta.).

II.10. Anexa pruebas como certificados médicos, ecografías y facturas por consulta médica, que
avalan su situación de gravidez y el estado de salud riesgoso emergente de la situación a la que
se sujeto (fs. 28 a 89).

II.11. Cursa certificado de atención prenatal 2765 de 7 de julio de 2011, otorgado por Ximena
Vladislavic Aguirre Gineco-Obstetra y Patricia Belmonte Herrera, Jefe Médico Regional de la
Caja Nacional de Seguridad Social de Tarija a favor de la accionante que recibió atención
médica desde el cuarto mes de embarazo (fs. 47).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 642
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.12. Cursa certificado de nacimiento emitido por la oficial de Registro Civil, Consuelo
Peñaranda, Libro 2 Partida 096 Folio 095, de 3 de febrero de 2012, por el que evidencia el
nacimiento del niño de la accionante el 15 de diciembre de 2011 (fs. 181).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante considera que las autoridades demandas han vulnerado sus derechos a la vida
propia y a la de su hijo, a la salud, a la familia, a la seguridad social, a la inamovilidad laboral y
a la no discriminación; toda vez que: a) Habiendo manifestado que se encontraba protegida por
la inamovilidad laboral en razón de su estado de gravidez, fue despedida; y, b) Tuvo que
interponer una serie de impugnaciones y reclamos que llegaron incluso ante la Directiva de la
Asamblea Legislativa Departamental, donde solicitó su reincorporación por despido ilegal,
como el hecho de haber sido discriminada por su estado de embarazo, los mismos no fueron
respondidos. En consecuencia corresponde analizar si el problema jurídico planteado puede ser
analizado vía acción de amparo.

III.1. La acción de amparo constitucional y su naturaleza subsidiaria

Al respecto, el Tribunal Constitucional, mediante la SC 0274/2011-R de 29 de marzo, estableció


que: "La acción de amparo constitucional, de acuerdo a los arts. 128 y 129.I de la CPE, tendrá
lugar: '…contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman, o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley' y '…siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados'; disposiciones que expresamente establecen que las supuestas
lesiones a los derechos fundamentales y garantías constitucionales deben ser reparadas en la
jurisdicción ordinaria, y sólo en defecto de ésta, de ser evidente la lesión al derecho invocado e
irreparable el daño emergente de la acción u omisión o de la amenaza de restricción de los
derechos, se acuda a la jurisdicción constitucional.

Este Tribunal, a través de su uniforme jurisprudencia, ha desarrollado el carácter subsidiario


del amparo constitucional, señalando que: '...no podrá ser interpuesta esta acción
extraordinaria, mientras no se haya hecho uso de los recursos ordinarios o administrativos y,
en caso de haber utilizado los mismos deberán ser agotados dentro de ese proceso o vía legal,
sea judicial o administrativa, salvo que la restricción o supresión de los derechos y garantías
constitucionales ocasione perjuicio irremediable e irreparable' (SSCC 1089/2003-R,
0552/2003-R, 0106/2003-R, 0374/2002-R, 1337/2003-R, entre otras)” (las negrillas son
nuestras).

Siguiendo ese razonamiento, la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre, estableció las siguientes


reglas y subreglas de improcedencia del amparo por subsidiariedad, cuando: “…1) Las
autoridades judiciales o administrativas no han tenido la posibilidad de pronunciarse sobre un
asunto porque la parte no ha utilizado un medio de defensa ni ha planteado recurso alguno, así:
a) Cuando en su oportunidad y en plazo legal no se planteó un recurso o medio de
impugnación; y, b) Cuando no se utilizó un medio de defensa previsto en el ordenamiento
jurídico; y, 2) Las autoridades judiciales o administrativas pudieron haber tenido o tienen la
posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios de defensa, así: a)
Cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se daría en casos de
planteamientos extemporáneos o equivocados; y, b) Cuando se utilizó un medio de defensa útil y
procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo no se agotó, estando al
momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de resolución. Ambos casos,
se excluyen de la excepción al principio de subsidiaridad, que se da cuando la restricción o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 643
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados, ocasionen perjuicio


irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional, procede la tutela
demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de resolución'" (las
negrillas son nuestras).

III.2. Sobre los derechos invocados

La accionante, a tiempo de interponer la acción de amparo constitucional, invocó como


vulnerados sus derechos a la vida propia y a la de su hijo, a la salud, a la familia, a la seguridad
social, a la inamovilidad laboral y a la no discriminación.

III.2.1. Respecto al derecho a la vida

Es el primero de los derechos fundamentales y que da inicio al catálogo desarrollado por el art.
15.I de la CPE; derecho primigenio cuyos alcances ya han sido establecidos por este Tribunal,
que en el entendido de que es el bien jurídico más importante, señaló que: "Es el derecho de
toda persona al ser y a la existencia, siendo su característica esencial la base para el ejercicio
de los demás derechos. Es decir, la vida misma es el presupuesto indispensable para que haya
titularidad de derechos y obligaciones. Es un derecho inalienable de la persona que obliga al
Estado en dos sentidos: su respeto y su protección. La autoridad estatal está
constitucionalmente impedida de hacer cosa alguna que destruya o debilite el contenido
esencial de esos derechos, debiendo crear las condiciones indispensables para que tengan cabal
observancia y pleno cumplimiento" (SC 1580/2011-R de 11 de octubre).

III.2.3. En cuanto al derecho a la salud

También previsto como derecho fundamental en el art. 18.I de la CPE, desarrollado por los arts.
35 al 44, de dicha Ley Suprema Sección II "La salud y a la seguridad Social" del Capítulo
Quinto sobre los "Derechos Sociales y Económicos", Título Segundo "Derechos Fundamentales
y garantías", de la Primera Parte de la "Bases Fundamentales del Estado, Derechos, Deberes y
Garantías". Derecho, sobre cuyo entendimiento este Tribunal en un problema similar mediante
la SC 1580/2011-R de 11 de octubre, estableció que: '… es el derecho en virtud del cual la
persona humana y los grupos sociales -especialmente la familia- como titulares del mismo,
pueden exigir de los órganos del Estado, en cuanto sujetos pasivos, que establezcan las
condiciones adecuadas para que aquellos puedan alcanzar un estado óptimo de bienestar físico,
mental y social y garanticen el mantenimiento de esas condiciones. El derecho a la salud no
significa solamente el derecho a estar en contra de la enfermedad sino el derecho a una
existencia con calidad de vida'. Entendimiento que en el actual orden constitucional encuentra
mayor eficacia puesto que la salud es un valor y fin del Estado Plurinacional, un valor en
cuanto el bienestar común respetando o resguardando la salud, conlleva al vivir bien, como
previene el art. 8.II de la CPE; pero también es un fin del Estado, tal cual lo establece el art. 9
num. 5) de la CPE, al señalar que son fines y funciones esenciales del Estado, además de los
que establece la Constitución y la Ley "Garantizar el acceso de las personas a la educación, a
la salud y al trabajo".

III.3. Marco constitucional y jurisprudencial respecto a la inamovilidad laboral de la


mujer embarazada.

En principio, es menester considerar que actualmente la protección a la mujer embarazada y de


los progenitores se encuentra prevista en la Constitución Política del Estado, garantizando la
inamovilidad laboral de las mujeres en estado de gestación y de los progenitores hasta que la
hija o el hijo cumpla un año de edad, conforme a lo previsto en su art. 48.VI: "Las mujeres no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 644
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

podrán ser discriminadas o despedidas por su estado civil, situación de embarazo, edad, rasgos
físicos o número de hijas o hijos. Se garantiza la inamovilidad laboral de las mujeres en estado
de embarazo, y de los progenitores, hasta que la hija o el hijo cumpla un año de edad".

Respecto a la inamovilidad funcionaria de la mujer embarazada, la jurisprudencia constitucional


se ha expresado a través de la SC 0434/2010-R de 28 de junio, señalando que: "La Ley 975 de 2
de marzo de 1988, referida a la inamovilidad funcionaria, en su art. Primero señala que: 'Toda
mujer en periodo de gestación hasta un año de nacimiento del hijo gozará de inamovilidad en
su puesto de trabajo en instituciones públicas o privadas'; sobre el campo de protección que le
asiste a la mujer embarazada, este Tribunal Constitucional uniforme y reiteradamente se ha
pronunciado otorgando la tutela solicitada cuando se ha evidenciado la ruptura o
interrupción de la relación laboral por despido u otra forma de cesación o quiebre de la
relación obrero patronal de una mujer en estado de gestación, durante todo el periodo
anterior y posterior al parto, que se hace extensible hasta que el nacido cumpla un año de
edad, esté laborando en el sector público o privado, así las SSCC 0443/2003-R, 0096/2004-R,
1905/2004-R, 0130/2005-R y 0286/2005-R, entre otras. Por otra parte, la Ley 975, no garantiza
únicamente la inamovilidad de la mujer embarazada en su fuente de trabajo, sino que:
'…también la protege de aquellas situaciones que en el trabajo impliquen esfuerzos que afecten
su salud, lo que la hacen merecedora de un tratamiento especial en el desempeño de su
actividad laboral que le permitan desarrollar éstas en condiciones adecuadas, por lo mismo no
puede ser afectada en su nivel salarial ni su condición en su puesto de trabajo' (SC 1536/2005-
R de 29 de noviembre).

'(…) el núcleo esencial del derecho reconocido como fundamental a la mujer embarazada y
en el estado de post parto con relación a su trabajo, estriba por una parte en la protección de
esa fuente de trabajo a través del reconocimiento de la inamovilidad funcionaria, y por otra,
en el tratamiento que se le dé a ésta permitiéndole que desarrolle sus actividades en
condiciones adecuadas. El primer ámbito de aplicación de este derecho desde la perspectiva
constitucional, supone que el empleador no podrá determinar, por causa alguna, una solución
de continuidad en la relación de trabajo; en cambio, en el otro ámbito se da cuando existiendo
la relación laboral firme en el que de por medio no existe un despido o ruptura de la relación
laboral, el empleador no afecte las condiciones laborales de la mujer trabajadora embarazada,
ya sea por causa de reducción de sus haberes o manteniendo o agravando las tareas que
regularmente desempeñe la empleada o funcionaria, en perjuicio evidente a su salud y
seguridad física, moral o psíquica'.

'(…) que, recientemente esta protección de inamovilidad funcionaria -que abarcaba solo a la
mujer gestante- ha sido extendida hacia el padre del menor hasta que su hija o hijo cumpla un
año, medida progresiva que como no podía ser de otra manera amplía el campo de protección
al futuro capital humano del Estado Plurinacional, que fue positivizado con la promulgación
del DS 0012 de 19 de febrero, en su art. 2 que señala «(INAMOVILIDAD LABORAL). La
madre y/o padre progenitores, sea cual fuere su estado civil, gozarán de inamovilidad laboral
desde la gestación hasta que su hijo o hija cumpla un (1) año de edad, no pudiendo ser
despedidos, afectarse su nivel salarial ni su ubicación en su puesto de trabajo»'" (las negrillas
son nuestras).

La jurisprudencia desarrollada en los Fundamentos Jurídicos III.1, III.2 y III.3, establecen en


principio, la excepción al principio de subsidiariedad dentro de la acción de amparo
constitucional, cuando se trata de analizar los casos en que supuestamente se vulneran los
derechos de mujeres embarazadas dentro del ambiente laboral; además de definir y establecer
interpretaciones sobre el derecho a la vida y a la salud y el marco constitucional respecto a la
inamovilidad laboral de la mujer embarazada, cuyo contenido condice plenamente con lo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 645
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecido por la Constitución Política del Estado (CPE) vigente, por lo que estas
interpretaciones son aplicables para la resolución del caso actualmente analizado.

III.4. Análisis del caso de autos

En el presente caso, la accionante, alega la vulneración de sus derechos a la vida propia y a la de


su hijo, a la salud, a la familia, a la seguridad social, a la inamovilidad laboral y a la no
discriminación; toda vez que las autoridades demandadas, sin tomar en cuenta que se encontraba
protegida por la inamovilidad laboral en razón de su estado de gravidez, fue despedida y a pesar
de haber interpuesto una serie de impugnaciones y reclamos que llegaron incluso ante la
Directiva de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija, en contra dicha determinación,
como el hecho de haber sido discriminada por su estado de embarazo, los mismos no fueron
respondidos.

Ahora bien, de la revisión de los antecedentes y pruebas que cursan en obrados, se evidencia que
la accionante, luego de presentar renuncia irrevocable al cargo de Asesora Legal del despacho
municipal de Tarija, al día siguiente, mediante memorándum 141 de 27 de julio de 2011, fue
designada como Asesor II del Área Jurídica de la Asamblea Legislativa Departamental de
Tarija; siendo así, que durante los tres primeros días de su actividad laboral mediante notas
dirigidas a la Oficial Mayor de dicho órgano legislativo, solicitó material y documentación para
concluir el informe que le fue encargado, acerca de la procedencia de contrataciones directas, y a
pesar de no contar con los medios necesarios, presentó informe legal al Presidente del órgano
legislativo, sobre la procedencia de las solicitudes de licencia y alternancia que fue presentada
por el Concejal, Marcelo Poma. Posteriormente a ello por memorándum 0148 de 29 de julio de
2011, la Oficial Mayor, hoy codemandada, resolvió dejar sin efecto el memorándum 141, por no
haberse adecuado a la estructura de la institución y a los requerimientos solicitados por sus
superiores; siendo así, que mediante memorial dirigido al Presidente de la Asamblea Legislativa
Departamental, Justino Zambrana, también hoy demandado, solicitó su reincorporación por
despido ilegal, como el hecho de haber sido discriminada por su estado de embarazo, recibiendo
posteriormente una simple nota por parte de la Oficial Mayor, donde se le hizo conocer que de
acuerdo al informe evaluado por Asesoría, en ningún momento se tomó conocimiento de su
estado por lo que el despido no fue ilegal, y que su designación por ser de libre nombramiento,
su remoción del cargo obedece a una atribución propia de quien la designó.

Ante esta situación, la accionante, mediante memoriales dirigidas a las autoridades hoy
demandas, como a la Directiva de la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija, solicitó
analizar su caso y se ordene la reincorporación inmediata a su fuente laboral como el pago de
sus salarios devengados, el pago retroactivo de subsidio prenatal en efectivo, para cuyo
cometido, anexó pruebas como: certificados médicos, ecografías y facturas por las consultas
médicas que recibió y que avalan su situación de gravidez y el estado de salud riesgoso
emergente de la situación a la que fue sujeto, los mismos que no fueron respondidas.
Finalmente, conforme al certificado emitido por el Oficial de Registro Civil, Consuelo
Peñaranda, se evidencia el nacimiento del niño de la accionante de 15 de diciembre de 2011.

De esta manera, la jurisprudencia anteriormente glosada es aplicable al caso que se analiza,


puesto que la accionante ha demostrado que las autoridades demandadas al haber procedido con
su despido, como el hecho de no haber revocado o dejado sin efecto el memorándum 0148, que
resolvió dejar sin efecto el memorándum 0141, por no haber logrado adecuarse a la estructura de
la institución y a los requerimientos solicitados por sus superiores, vulneraron los derechos de
ella y del ser en gestación que se invocan en la acción. Por otra parte la mujer en estado de
gravidez, para gozar de inamovilidad no se encuentra obligada a comunicar su embarazo de
acuerdo a la SC 2567/2010-R de 19 de noviembre.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 646
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo expresado precedentemente, la situación planteada se encuentra dentro las previsiones y


alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías al haber
“concedido” la acción, ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y
dio correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 02/2012
de 13 de febrero, cursante de fs. 193 a 203 vta., dictada por la Sala Civil Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Tarija y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0106/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00086-2012-01-AL
Departamento La Paz

En revisión la Resolución 17/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 25 a 27, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Luis Guillermo Chura Flores en representación de
Luis César Fernández Ramos contra Carlos Guerrero Arraya, Juez Primero de Instrucción
en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 31 de enero de 2012, cursante de fs. 16 a 19, el accionante, por su
representado, expone los siguientes fundamentos de hecho y derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El Ministerio Público, a denuncia y querella particular de personeros del “Banco Bisa”, sigue un
proceso penal contra su representado, por presunta complicidad en la comisión de los delitos de
estafa, manipulación informática y otros, al haber retirado supuestamente del domicilio de
Eduardo Fernández Ramos, documentos y equipos de computación que serían parte de la
investigación. En ese sentido, fue aprehendido por orden de la Fiscal; posteriormente, como
medida cautelar se dispuso su detención preventiva, por orden de la Jueza Primera de
Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Cochabamba, por Resolución de 22 de
julio de 2011.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 647
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Denuncia que se incurrieron en vicios de nulidad absoluta, que pese al reclamo oportuno y
vehemente de sus abogados, fueron validados y ratificados por la Jueza de control jurisdiccional,
donde promovió incidente de nulidad de la aprehensión, ya que la participación criminal que se
atribuye a su representado, es solamente en condición de cómplice y cuyo mínimo legal en la
escala de reclusión sería apenas de un mes y de un año en caso de presidio, lo que haría
imposible la detención preventiva. Por consiguiente, la aprehensión ejecutada por el Ministerio
Público, como la detención preventiva dispuesta por la autoridad judicial, son totalmente
defectuosas, citando al efecto la SC 0490/2010-R de 5 de julio.

Aclara que en la presente acción de libertad, se denuncia la “agresión constitucional” (sic)


cometida por la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal de Cochabamba, a tiempo de
considerar la aplicación de medidas cautelares, pero que la causa fue acumulada ante el Juez
Primero de Instrucción de La Paz, en virtud a una resolución sobre incompetencia en razón de
territorio, a quien se demanda “sólo a los propósitos del informe correspondiente” (sic).

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante, considera lesionado el derecho a la libertad personal de su representado, sin citar


precepto constitucional alguno.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente” la acción de libertad y se ordene a la autoridad judicial de


grado, considere el mínimo de la pena prevista para la complicidad y aplique medidas
sustitutivas a la detención preventiva.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública de 2 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
23 a 24, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante no asistió a la audiencia.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Carlos Guerrero Arraya, Juez Primero de Instrucción en lo Penal de La Paz, en su informe oral
señaló: a) El ahora representado, fue imputado en Cochabamba, mientras que el Juzgado a su
cargo solamente emitió una resolución, disponiendo que por inhibitoria sean remitidos los
antecedentes a la ciudad de La Paz; b) El representado del accionante guarda detención
preventiva por orden emitida por la Jueza cautelar de dicha ciudad; y, c) La acción se halla
dirigida contra actos procesales que no fueron diligenciados por su autoridad, especialmente
sobre la detención preventiva, donde el representado del accionante considera que se hubiera
lesionado su derecho a la libertad.

I.2.3. Intervención del representante del Ministerio Público

El Representante del Ministerio Público, en base al informe de la autoridad demandada, indicó


que el accionante no fundamentó su acción de libertad conforme lo prevé el art. 125 de la
Constitución Política del Estado (CPE), pues no justificó cómo estaría detenido ilegalmente su
representado, que tiene en su contra un proceso penal a cargo del Fiscal y de la autoridad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 648
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

judicial, contando con recursos ordinarios que puede utilizar como medio de defensa inmediato,
previo a acudir a la jurisdicción constitucional, por lo que requirió se deniegue la tutela
solicitada.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituida en Tribunal
de garantías, dictó la Resolución 17/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 25 a 27, por la que
denegó la acción de libertad, con los siguientes fundamentos: 1) Esta acción se rige por el
principio de subsidiariedad excepcional, por lo que sólo puede ser activada luego de agotados
los mecanismos de defensa idóneos en la vía ordinaria, a fin de que la autoridad judicial que
conoce la causa, repare las supuestas lesiones a la libertad física o de locomoción del imputado,
debido a que la vía constitucional no tiene la vocación de reparar en exclusiva todas las formas
de lesión a la libertad, peor cuando se tenga abierto un proceso penal; 2) El accionante debió
denunciar los actos restrictivos de la libertad al juez cautelar que ejerce control jurisdiccional del
proceso. De la revisión del cuaderno procesal, se advierte que el imputado en ningún momento
reclamó sobre su aprehensión por la Fiscalía; evidentemente, cuestionó otras circunstancias
como la ejecución del mandamiento en horas de la noche y el pedido de control jurisdiccional
que fueron rechazados, por lo que no agotó los recursos ordinarios antes de acudir a la
jurisdicción constitucional; 3) La Jueza Primera de Instrucción en lo Penal de Cochabamba, a
tiempo de rechazar el único pedido de la defensa sobre control jurisdiccional, determinó la
legalidad de la aprehensión, por considerar que era el mecanismo adecuado para asegurar la
presencia del imputado, razón por la que ordenó su detención preventiva, medida en la que ya
debe consignarse los delitos que se atribuyen al imputado en su grado máximo, siendo que los
ilícitos que se le atribuyen se enmarcan en esa exigencia, aún sea en grado de complicidad; y, 4)
La SC 1130/2011-R de 19 de agosto, estableció que existe detención ilegal o indebida de una
persona cuando no se cumplen con las formalidades legales, en el caso presente, la aprehensión
y consiguiente detención preventiva se hizo en base de los arts. 226, 233,234 y 235 del Código
de Procedimiento Penal (CPP), dentro de una acción penal con imputación formal.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. El 22 de julio de 2011, se realizó audiencia de medidas cautelares ante la Jueza Primera de
Instrucción en lo Penal de Cochabamba, en la que el representante del Ministerio Público amplió
la imputación formal contra Luis César Fernández Ramos (representado del accionante),
aduciendo que habría participado como cómplice en la comisión de los delitos de estafa,
manipulación informática y otros. Asimismo, solicitó la aplicación de la medida cautelar de
detención preventiva, al concurrir los presupuestos establecidos en los arts. 234.1 y 2; 235.1, 2 y
4 del CPP (fs. 1 a 5 vta.).

II.2. En la misma audiencia, la defensa solicitó control jurisdiccional sobre los actos realizados
por el Ministerio Público, específicamente de la ejecución del mandamiento de aprehensión, por
cuanto se habría practicado en hora inhábil, planteándose incidente de nulidad, peticionando al
mismo tiempo medidas sustitutivas a la detención preventiva, en razón de que el imputado
colaboró en la investigación al presentarse voluntariamente en dos oportunidades (fs. 1 vta. a 2).

II.3. La Jueza cautelar rechazó la solicitud descrita anteriormente, considerando que la ejecución
de la orden de aprehensión cumplió con la debida fundamentación y motivación conforme al art.
226 CPP, por existir suficientes elementos de convicción sobre la participación del imputado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 649
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

como cómplice de la comisión de los delitos indicados. Asimismo, dispuso la detención


preventiva del imputado Luis César Fernández Ramos, a cumplirse en el recinto penitenciario de
“San Sebastián”, por haberse acreditado fehacientemente por el Ministerio Público, su
participación en calidad de cómplice de los delitos de estafa, manipulación informática y otros,
al haber sustraído documentación y dos CPU's del domicilio de su hermano Eduardo Fernández
Ramos (fs. 2 a 3 vta.).

II.4. De fs. 7 a 12, cursa orden instruida expedida por Carlos Guerrero Arraya, Juez Primero de
Instrucción en lo Penal de La Paz, ahora demandado, en cuyo texto se transcribe el Auto de 25
de noviembre de 2011, por el cual dicha autoridad declaró probada la excepción de
incompetencia en razón de territorio planteada por José Luis Rivera Mejía y dispuso la
inhibitoria de la Jueza Primero de Instrucción en lo Penal de Cochabamba, ordenando el envió
del proceso con detenidos -entre ellos el representado del accionante- al entonces Distrito
Judicial de La Paz. El mandamiento de detención preventiva, librado por el Juez demandado, en
contra del representado del accionante, de 9 de enero de 2012, cursa a fs. 14.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante considera vulnerado el derecho a la libertad de su representado, a causa de una


detención indebida promovida por el Ministerio Público al ejecutar su aprehensión en hora
inhábil y también por la Jueza cautelar de Cochabamba, al disponer su detención preventiva, que
pese a denuncia oportuna de sus abogados no fue restablecido, desconociendo lo previsto por el
art. 27, en relación al art. 39, ambos del Código Penal (CP), ya que la participación criminal que
se le atribuye es solo en grado de cómplice, siendo que los referidos artículos establecen el
mínimo legal en la escala de reclusión de un mes y un año tratándose de presidio, lo cual haría
improcedente la detención preventiva; sin embargo fue aplicada en franca agresión a su derecho
a la libertad, por cuanto la Jueza no hizo una correcta evaluación de los citados artículos,
tampoco dio cumplimiento a los presupuestos procesales contenidos en los artículos 226 y 232
del CPP. En consecuencia, corresponde en revisión examinar los extremos denunciados, si son
evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Sobre la legitimación pasiva de la autoridad demandada

La SC 1094/2010-R de 27 de agosto, respecto a la legitimación pasiva, señaló que se entiende


por tal calidad, “…a la coincidencia que debe existir entre la autoridad que presuntamente
causó la violación a los derechos y aquélla contra quién se dirige la acción”. En base a dicho
entendimiento, en el caso presente, resulta que evidentemente la autoridad accionada es
diferente de la autoridad judicial que ordenó y ejecutó la presunta indebida detención preventiva
del representado del accionante, ya que los supuestos actos lesivos habrían sido cometidos por la
Jueza Primera de Instrucción en lo Penal de Cochabamba. Al respecto, es necesario aclarar que
dicha autoridad perdió competencia, al haberse allanado a una excepción de incompetencia en
razón de territorio planteada por otros co-imputados, conforme se evidencia de la Resolución de
25 de noviembre de 2011 (fs. 8 a 9) y del decreto de 9 de enero de 2012 (fs. 11), donde se da
cuenta de haberse remitido el cuaderno de investigaciones al Juzgado Primero de Instrucción en
lo Penal de La Paz a cargo de Carlos Guerrero Arraya, ahora demandado, quien asumiendo la
competencia del caso, libró mandamiento de detención preventiva en contra del representado del
accionante, a partir de lo cual adquiere la calidad de legitimado pasivo en la presente acción de
libertad.

Por consiguiente, no sería correcto sostener que la reparación de los actos lesivos denunciados
por el accionante, sean reclamados ante una autoridad judicial que perdió competencia por
inhibitoria; más aún cuando existe una autoridad judicial que ejerce plena competencia actual
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 650
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

sobre la causa y con suficiente legitimación pasiva para conocer, sustanciar y resolver los
recursos ordinarios que correspondan en derecho. En este sentido, no es posible sustentar la falta
de legitimación pasiva de la autoridad accionada como causa para neutralizar la presente acción
tutelar.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

El art. 125 de la CPE establece que la acción de libertad tiene por objeto garantizar la tutela de
los derechos fundamentales a la vida y a la libertad personal o de locomoción, cuando sean
restringidos o suprimidos ilegalmente o amenazados de serlo, por actos u omisiones indebidas
de autoridades o particulares; permitiendo en tales casos a los afectados, acudir inmediatamente
ante el juez o tribunal competente en materia penal, con la finalidad de que se guarde tutela a la
vida y a la libertad en los casos de persecución indebida, procesamiento ilegal y detención
indebida.

Del mismo modo, los convenios y tratados internacionales en materia de derechos humanos que
conforman el bloque de constitucionalidad, promueven que esta acción se constituya en un
mecanismo breve y sumario destinado a resguardar el derecho a la libertad física o de
locomoción en los supuestos anotados anteriormente. Sin embargo, para que prospere la acción
de libertad en la vía constitucional, previamente debe haberse agotado por el accionante todos
los mecanismos de defensa que franquea el ordenamiento procesal ordinario, haciendo uso
adecuado de los medios y recursos legales que sean idóneos, eficientes y oportunos para el
efectivo restablecimiento de este derecho fundamental, de donde se concluye que la vía
constitucional opera solamente en aquellos casos en que, a pesar de haberse impugnado y
agotado los mencionados medios o recursos ordinarios, no se haya reparado efectivamente la
vulneración denunciada.

En este sentido, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, moduló tres supuestos en los que no es


posible ingresar de manera excepcional al análisis de fondo de la problemática planteada, a
objeto de preservar el justo equilibro y complementariedad entre la jurisdicción ordinaria y
constitucional, siendo tales supuestos los siguientes:

“Primer supuesto: Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía
cometieron arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y
todavía no existe aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el
Juez Cautelar de turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal,
es decir, con el aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad
jurisdiccional, es ante ella donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a
sus derechos. De no ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que
el soberano a través del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez
constitucional en el control de la investigación.

Segundo Supuesto: Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una
resolución judicial de medida cautelar que; por ende, afecta al derecho a la libertad física o
de locomoción, con carácter previo a interponer la acción de libertad, se debe apelar la
misma, para que el superior en grado tenga la posibilidad de corregir la arbitrariedad
denunciada. Puesto que el orden legal penal ha previsto ese medio impugnativo, precisamente
para que a través de un recurso rápido, idóneo, efectivo y con la mayor celeridad se repare en
el mismo órgano judicial, las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen cometido en dicha
fase o etapa procesal. Lo propio si está referido a cuestiones lesivas a derechos fundamentales
relacionados a actividad procesal defectuosa, o relacionado al debido proceso, casos en los
cuales se debe acudir ante la autoridad judicial que conoce la causa en ese momento procesal,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 651
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

puesto que el debido proceso es impugnable a través de la acción de libertad, sólo en los casos
de indefensión absoluta y manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o
restricción a la libertad física.

Tercer supuesto: Si impugnada la resolución la misma es confirmada en apelación; empero,


en lugar de activar inmediatamente la acción libertad, decide voluntariamente, realizar una
nueva petición ante la autoridad ordinaria, tendiente a un nuevo análisis y reconsideración de
su situación jurídica, sea mediante una solicitud de modificación, sustitución, cesación de
detención preventiva, etc., y la misma está en trámite, en esos casos, ya no es posible acudir a la
jurisdicción constitucional impugnando la primera o anterior resolución judicial, donde se
emitió el auto de vista, inclusive; por cuanto las partes de un proceso están impelidas de actuar
con lealtad procesal, de no ser así, se provocaría una duplicidad de resoluciones en ambas
jurisdicciones, e incidiría negativamente en el proceso penal de donde emerge la acción tutelar
(las negrillas fueron agregadas).

Específicamente, la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad referente a la aplicación


de la medida cautelar de detención preventiva, fue resuelta por la SC 0160/2005-R de 23 de
febrero, citada a su vez en la SC 0578/2010-R de 10 de julio, donde se precisó lo siguiente: “El
Código de procedimiento penal, dentro del sistema de recursos que dispensa a las partes, prevé
el de apelación contra las resoluciones que dispongan, modifiquen o rechacen las medidas
cautelares, que se muestra como un recurso sumario, pronto y efectivo, dado que conforme lo
establece el art. 251 del CPP, una vez interpuesto este recurso, las actuaciones pertinentes
deben ser remitidas ante la Corte Superior de Justicia, en el término de veinticuatro horas,
debiendo el tribunal de apelación resolver el recurso, sin más trámite y en audiencia dentro de
los tres días siguientes de recibidas las actuaciones.

No cabe duda que el recurso de apelación aludido, dada su configuración procesal, es un


recurso idóneo e inmediato de defensa contra supuestas lesiones y restricciones al derecho a la
libertad de los imputados, en el que el tribunal superior tiene la oportunidad de corregir, en su
caso, los errores del inferior invocados en el recurso. Es idóneo, porque es un recurso
adecuado, apropiado, establecido expresamente en la ley para impugnar las medidas cautelares
que vulneren el derecho a la libertad del imputado, en ocasión de la aplicación de las medidas
cautelares. Es inmediato, porque el recurso es resuelto sin demora, dado que la ley establece un
lapso brevísimo para su resolución (tres días).

…En consecuencia, ese es el recurso que debe utilizarse para impugnar los actos del juez que se
consideren lesivos al derecho aludido, y no acudir directamente o de manera simultánea a la
justicia constitucional a través del recurso de hábeas corpus, garantía que podrá ser utilizada
sólo cuando el tribunal superior en grado no haya reparado las lesiones denunciadas”.

III.3. Dilación indebida en la remisión de obrados en revisión

De la revisión de obrados se constata también que los miembros de la Sala Penal Tercera del
Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, no actuaron conforme a la sumariedad y con
celeridad en la tramitación de la presente acción de libertad, habiendo incurrido en dilación
indebida en la remisión de oficio de la Resolución ante este Tribunal Constitucional
Plurinacional, por cuanto el fallo fue emitido el 2 de febrero de 2012, habiéndose remitido recién
el 9 del mismo mes y año, fuera del plazo establecido por el art. 126.IV de la CPE concordante
con el art. 64 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), lo que constituye falta
gravísima al tenor del art. 68.3 de esta última Ley.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 652


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Cabe recordar que de acuerdo al nuevo orden constitucional, el art. 8.I de la CPE, dentro de los
principios y valores del nuevo Estado Plurinacional de Bolivia, asume y promueve como
principios ético-morales de la sociedad plural, el ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no seas flojo,
no seas mentiroso ni seas ladrón); máximas milenarias que fueron constitucionalizadas y
resumen de manera extraordinaria la moral que toda persona, natural o jurídica debe practicar en
todas sus actividades. En ese sentido, se hace énfasis en el principio del ama qhilla, que
establece una conducta de vida diligente que debe observar todo individuo, con mayor razón un
servidor público como es el juez, de quien debe exigirse una actitud acuciosa en la
administración de justicia, sobre todo cuando afecta al suma qamaña (vivir bien) y al ñandereko
(vida armoniosa); principios ético morales que constituyen directrices de obligada observancia
por los servidores de justicia cuando resuelvan sobre derechos y garantías constitucionales,
teniendo el deber imperativo de impulsar el desarrollo del proceso, siendo responsables de
cualquier demora resultante de su inactividad, en la construcción de la nueva justicia en el
Estado Plurinacional.

III.4. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se establece que es de aplicación a la


problemática planteada, el segundo de los supuestos anteriormente desarrollados, por cuanto el
representado del accionante, no interpuso el recurso de apelación incidental previsto por los arts.
251 y 403.3 del CPP en contra de la Resolución de la Jueza cautelar que dispuso su detención
preventiva, para que así el superior en grado, tenga la posibilidad de compulsar los argumentos
que se esgrimen en la presente acción de libertad, en cuanto al mínimo de la pena en relación al
grado de complicidad por el que es procesado y que a juicio del accionante harían viable la
aplicación de medidas sustitutivas a la detención preventiva a favor de su representado, dado que
como aquél mismo aclara, lo que se denuncia en la presente acción tutelar, es la “agresión
constitucional” (sic) cometida por la Jueza Primera de Instrucción en lo Penal de Cochabamba,
en cuyo entendido, debió haberse promovido oportunamente el recurso ordinario indicado, no
pudiendo salvar su negligencia acudiendo directamente a la jurisdicción constitucional;
correspondiendo en consecuencia aplicar la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad,
lo que impide ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada.

En consecuencia, el Tribunal de Garantías -al denegar la acción- ha actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional y el art. 12.7 de la LTCP, en revisión,
resuelve: APROBAR la Resolución 17/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 25 a 27,
pronunciada por la Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz; y en
consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de
fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 653


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0107/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00210-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 62/012 de 15 de febrero de 2012, cursante de fs. 212 a 214 vta.,
pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Dionicio Cataldi
Alanoca, Gerente de Grandes Contribuyentes (GRACO) Santa Cruz del Servicio de
Impuestos Nacionales (SIN) contra Hugo Suárez Calbimonte y Julio Ortiz Linares, ex
Ministros; y Norka Mercado Guzmán y Antonio Campero Segovia, Magistrados, todos de
la Corte Suprema -ahora Tribunal Supremo- de Justicia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 6 de febrero de 2012, cursante de fs. 27 a 35 vta., el accionante


expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Aplicado el procedimiento de verificación cruzada referente a la prestación de servicios,


contratos de publicidad y pagos por servicios recibidos al contribuyente Sociedad Agropecuaria
Santa Cruz (SOAGSA), se constató la existencia de contratos de publicidad suscritos tanto en la
ciudad de La Paz como en la de Santa Cruz, que no contaban con la correspondiente nota fiscal,
alcanzando el monto por las operaciones realizadas a un total de Bs8 506 970.- (ocho millones
quinientos seis mil novecientos setenta bolivianos) que constituye la base imponible, conforme a
lo previsto por los arts. 1 incs. b) y c), 3 inc. b), 4 y 12 de la LRT de Reforma Tributaria (LRT) y
12 del Decreto Supremo (DS) 21530 de 27 de febrero de 1987, observaciones por ingresos no
declarados establecidas en el Impuesto al Valor Agregado (IVA), que tienen incidencia en la
determinación del Impuesto a las Transacciones (IT), que alcanzan a Bs255 209.- (doscientos
cincuenta y cinco mil doscientos nueve bolivianos), de conformidad a lo previsto en los arts. 72,
73 y 74 de la LRT y 2 inc. d) del DS 21532 de febrero de 1987, así como se establecieron
observaciones del Impuesto a la Utilidad de las Empresas (IUE) gestión 2003, por cuanto para la
determinación de la utilidad neta sujeta al impuesto, el contribuyente efectuó la deducción de
gastos no operativos, compuestos por una pérdida en la venta de activos fijos no deducible de la
utilidad bruta del contribuyente para fines de determinación del IUE, situación que originó
ajuste en la determinación de este impuesto en la gestión 2003, por el monto de Bs2 557 834.-
(dos millones quinientos cincuenta y siete mil ochocientos treinta y cuatro bolivianos) y en la
gestión 2004, por Bs633 881.- (seiscientos treinta y tres mil ochocientos ochenta y un
bolivianos), según lo previsto en los arts. 36, 37 y 47 de la LRT y 6, 7 y 8 del DS 24051 de 29
de junio de 1995.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 654


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Explica que el art. 7 de la Ley 2626 de 22 de diciembre de 2003, que sustituyó el primer párrafo
de la Disposición Transitoria Tercera del Código Tributario Boliviano, dispuso que en caso de
impuestos cuyas recaudaciones correspondan al SIN, el Programa Transitorio, Voluntario y
Excepcional, alcanza a adeudos tributarios en mora al 30 de junio de 2003, cuyo vencimiento de
la obligación tributaria es el mes siguiente, “julio/2003” y que no se encuentra alcanzado por el
Programa antes señalado; por lo que una vez realizada la verificación, la Administración
Tributaria emitió la Resolución Determinativa GGSC-DJC 431/2007 de 20 de diciembre,
estableciendo un adeudo tributario de Bs10 653 028.- (diez millones seiscientos cincuenta y tres
mil veintiocho bolivianos) por concepto de ingresos no declarados del contribuyente SOAGSA;
ante lo cual, éste interpuso demanda contenciosa tributaria, resuelta en primera instancia a través
de la Resolución 54 de 30 de octubre de 2009, declarando probada la demanda. Posteriormente,
la Administración Tributaria interpuso recurso de apelación, resuelto por Auto de Vista 550 de
23 de diciembre del mismo año, confirmando en todas sus partes la Resolución impugnada o
recurrida, ante esa situación se interpuso recurso de casación en la forma y en el fondo, que fue
resuelto con una “agilidad” sorprendente, mediante Auto Supremo 239 de 12 de agosto de 2011,
notificado el 25 del mismo mes y año por la Sala Social y Administrativa Primera de la entonces
Corte Suprema de Justicia, quienes declararon infundado el recurso de casación, alegando por
una parte que el Auto de Vista recurrido fue emitido conforme exige la norma procesal,
resolviendo los puntos apelados de la sentencia con la debida motivación, pertinencia y
exhaustividad; y por otro, respecto al fondo, que la empresa SOAGSA se acogió al Programa
Transitorio Voluntario y Excepcional bajo la modalidad de Pago Único Definitivo, prevista en la
Disposición Transitoria Tercera del Código Tributario Boliviano, por lo que no era correcto que
el ente tributario pretenda cobrar tributos adeudados en doble partida cuando voluntariamente se
pagó los indicados impuestos acogiéndose al “perdonazo”, argumentos con los cuales la Sala
Social y Administrativa Primera desconoció de manera ilegal la calidad de sujeto pasivo del
contribuyente SOAGSA, eliminó el hecho imponible, modificó el contenido del Programa
señalado y amplió su aplicación a periodos de gestiones 2003 y 2004, contraviniendo las leyes
vigentes al efecto, consumándose con ese actuar la violación del derecho constitucional al
debido proceso de la institución ahora accionante.

Aclara que, los periodos objeto de determinación indicados en la Resolución Determinativa


GGSC-DJCC 431/2007 son de las gestiones 2003 y 2004 con cierre en los años siguientes, 30 de
junio de 2004 y 30 de junio de 2005, que no están dentro del alcance del Programa Transitorio,
Voluntario y Excepcional, como señaló de forma ilegal el Auto Supremo 239, pretendiendo
modificar las propias leyes que prohíben la regulación en los periodos observados; así como no
se justificó razonablemente la decisión de los agravios expuestos en el recurso de casación,
motivos por los cuales la Resolución carece de una debida motivación entre los hechos y la
conclusión del Auto Supremo.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante, alega la vulneración de su derecho al debido proceso, citando al efecto el art.


115.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela y en consecuencia se disponga la nulidad del Auto Supremo 239 de
12 de agosto de 2011 y, a ese efecto, se ordene al Tribunal Supremo de Justicia emita una nueva
resolución, restableciendo el derecho al debido proceso respecto a la aplicación objetiva de la
ley.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 655
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Realizada la audiencia pública de 15 de febrero de 2012, en presencia de la parte accionante y de


la tercera interesada SOAGSA, ausentes las autoridades demandadas, y el representante del
Ministerio Público, según consta en el acta cursante de fs. 204 a 211 vta., se produjeron los
siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, en audiencia ratificó el tenor íntegro de la acción de amparo


constitucional y añadió que el Auto Supremo 239 impugnado fue emitido hasta de una manera
“delincuencial” por las ex autoridades demandadas, quienes declarando infundado el recurso
vulneraron el derecho fundamental al debido proceso y usurpando funciones, favorecieron al
contribuyente por el periodo del 2004.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Hugo Roberto Suárez Calbimonte, ex Ministro de la Corte Suprema de Justicia, en el informe


cursante de fs. 67 a 68, afirmó lo siguiente: a) De conformidad a las Leyes 2626 y 2647 de 1 de
abril de 2004 y los DDSS 27369 y 27352, se amplió el plazo para que las empresas se acojan al
Programa Transitorio, Voluntario y Excepcional, bajo la modalidad de pago único, llamado
“perdonazo”, por lo que se consideró que la obligación tributaria del sujeto pasivo SOAGSA,
quedó extinguida, no pudiendo permitir que en estrados judiciales la administración tributaria
cobre por doble partida un tributo que se encontraba saldado a favor del Estado, resultando
como lógica consecuencia, se deje sin efecto la Resolución Determinativa GGSC-DJCC
431/2007; b) Se tuvo la convicción que SOAGSA no fue sujeto de la obligación contractual en
sí, sólo emitió las ordenes publicitarias, no suscribió contrato alguno de publicidad, siendo otras
empresas las que facturaron y cobraron los servicios, por lo que no nació el hecho generador del
tributo; c) Respecto a los Ministros que firmaron el Auto Supremo, se amplió el plazo para el
acogimiento al Programa Transitorio, Voluntario y Excepcional, lo que implicaría usurpación de
funciones y competencia no atribuida por ley, la administración tributaria tenía expedita la vía
del recurso directo de nulidad que no fue intentada en el plazo de treinta días de su notificación;
y, d) Tanto la resolución que declaró probada la demanda contencioso tributaria y dejó sin valor
la Resolución Determinativa impugnada, así como el Auto de Vista que confirmó dicho fallo e
incluso el informe técnico de los juzgados, coinciden con el criterio expresado por quienes
suscribieron el Auto Supremo en cuestión, aspecto que debe ser considerado.

Por su parte, Julio Ortiz Linares, ex Ministro de la Corte Suprema de Justicia, por informe
cursante de fs. 69 a 70; señaló: 1) Emitida la Resolución Determinativa GGSC-DJCC 431/2007,
SOAGSA interpuso demanda contenciosa tributaria contra GRACO Santa Cruz del SIN.
Radicada la causa en el Juzgado Primero Administrativo, Coactivo Fiscal y Tributario del ahora
Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, se emitió la Sentencia 54, declarando probada
la demanda, disponiendo dejar sin efecto la Resolución Determinativa antes señalada, dicha
Resolución fue confirmada por el Auto de Vista 550, emitido por la Sala Social y
Administrativa, motivando recurso de casación en la forma y el fondo planteado por GRACO
Santa Cruz del SIN, que fue declarado infundado por Auto Supremo 239; 2) Se evidencia que el
2 de abril de 2004, mediante formulario 6042, la empresa demandada se acogió al Programa
Transitorio, Voluntario y Excepcional, bajo la modalidad de Pago Único Definitivo en
cumplimiento de la Disposición Transitoria Tercera del Código Tributario Boliviano, que se
efectuó a los noventa días siguientes a la publicación del Reglamento de este Programa, lo que
limita a la administración tributaria pueda ejercer de forma posterior cualquier fiscalización,
determinación y recaudación sobre impuesto y periodos comprendidos en el programa y,
habiendo admitido dicho pago, no puede cobrar de forma doble; 3) En cuanto al plazo para
acogerse al Programa Transitorio, Voluntario y Excepcional, éste fue ampliado por Ley 2647,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 656
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

desde el 2 de abril hasta el 14 de mayo de 2004, por lo que los adeudos tributarios se
extinguieron, ya que la empresa demandada los pagó en tiempo oportuno y en vigencia de la
norma precitada; y, 4) El Auto Supremo 239 contiene la suficiente motivación en cuento a su
estructura, respondiendo de forma precisa y clara al recurso de casación, tomando en cuenta un
análisis pormenorizado de los antecedentes del proceso y la normativa tributaria vigente.

Antonio Campero Segovia y Norka Mercado Guzmán, actuales Magistrados de la Sala Social y
Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia, mediante informe cursante de fs. 71 a 74,
alegaron: i) La acción de amparo constitucional, debe ser dirigida contra la autoridad que se
encuentre desempeñando la función, independientemente de que sea ella quien ejecutó el acto
lesivo; sin embargo, corresponde señalar que el art. 8.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011, señala que todas las causas pendientes de resolución que se encuentren en la Corte
Suprema de Justicia al 31 de diciembre de 2011, serán resueltas por los Magistrados suplentes
hasta su liquidación final, norma que fija la competencia tanto para los Magistrados titulares
como de los Magistrados liquidadores, por lo que carecerían de legitimación pasiva para el caso
eventual de que el Tribunal de garantías emitiera una resolución favorable, por lo que dicha
resolución corresponde a los Magistrados liquidadores del Tribunal Supremo de Justicia al
tratarse de una causa ingresada antes del 31 de diciembre de 2011, ya que la contingente nulidad
del Auto Supremo 293 haría inexistente dicha Resolución, retrotrayendo el trámite hasta el
estado de estar pendiente de resolverse; ii) No se han cumplido los numerales 3, 4 y 6 del art. 77
de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), por cuanto el accionante expuso de
manera desordenada los antecedentes del proceso, no identificó con precisión la vulneración
expresa y concreta de un derecho o garantía para poder asumir defensa; por otro lado, solicita al
Tribunal de garantías que ingrese a la valoración de la legalidad ordinaria; iii) Los actuales
Magistrados titulares, no fueron los que pronunciaron la Resolución objeto de la acción de
amparo constitucional, lo que dificulta informar sobre el fondo de las pretensiones deducidas por
el accionante, porque desconocen los fundamentos fácticos y jurídicos que dieron lugar a la
Resolución emitida en casación; iv) En caso que hubiera usurpado funciones, la acción de
amparo constitucional no es la vía idónea para su impugnación, al encontrarse previsto a ese
efecto el recurso directo de nulidad al que la parte accionante no ha recurrido; v) No es evidente
la vulneración del derecho al debido proceso en su vertiente de la debida fundamentación,
porque la resolución pronunciada está debidamente motivada, permitiendo su comprensión con
claridad, lo que determinó declarar infundado el recurso de casación y nulidad presentado por el
SIN al no haber encontrado error in procedendo o in judicando en la actuación de los jueces de
grado; y, vi) La acción de amparo constitucional no es un medio de impugnación por el que sea
factible revisar la valoración de la prueba o la aplicación de la norma, al corresponder ello a la
justicia ordinaria, siendo que la entidad accionante solicita el Tribunal de garantías efectué dicha
labor, sosteniendo que en las dos primeras instancias y en casación se efectuó una interpretación
diferente a su criterio.

1.2.3. Intervención del tercero interesado

El abogado de SOAGSA, en calidad de tercero interesado, señaló: a) Luego de todo el proceso


se llegó a determinar que no es evidente que se suscribió contratos por ocho millones y medio
que es la tesis del SIN, sino lo que se ha hecho es llevar órdenes de emisión para que otras
empresas publicitarias cumplan el servicio, por lo que a su turno los Tribunales de instancia han
reconocido que no se debe al Estado y que no es sujeto pasivo de ese impuesto, ya que la
empresa no es una televisora; b) La Disposición Transitoria Tercera de la Ley 2492, creó un
programa transitorio para regulación de adeudos, que si bien establecía un periodo inicial,
después fue ampliado por la Ley 2026 y nuevamente mediante Ley 2647, hasta el 14 de mayo de
2004, situación señalada en el Auto Supremo ahora impugnado; c) No se puede resolver el tema
de competencia o usurpación de funciones en una acción de amparo constitucional, habiendo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 657
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

“Impuestos Internos” incurrido en negligencia, por cuanto en conocimiento del Auto Supremo
podía plantear el recurso directo de nulidad y no lo hizo; y, d) No es evidente la falta de
motivación del Auto Supremo que resolvió el recurso de casación, pues se utilizó como razón de
la decisión tanto el análisis en la forma como en el fondo.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituida en Tribunal de


garantías, por Resolución 62/012 de 15 de febrero de 2012, cursante de fs. 212 a 214 vta.,
denegó la acción de amparo constitucional, con los siguientes fundamentos: 1) El Auto Supremo
239, reconoce la licitud de las actividades de SOAGSA declarando infundado el recurso de
casación planteado por GRACO Santa Cruz del SIN, tanto en la forma como en el fondo; 2)
Ante la supuesta usurpación de funciones alegadas por el accionante, correspondía
oportunamente el planteamiento del recurso directo de nulidad, por lo que se ha equivocado la
vía de la acción de amparo constitucional; 3) En relación a que el Auto Supremo impugnado no
tuviese una adecuada motivación, no advierte de forma clara la justificación razonable de la
decisión, causando agravios al “recurrente”, de la revisión del mismo se evidencia que se
encuentra suficientemente motivado y fundamentado, comprendiendo razonablemente los
argumentos que determinan la decisión asumida, así como respecto a los motivos específicos y
formales; y, 4) El accionante no ha especificado expresamente cuál de las vertientes del derecho
al debido proceso se encontraría lesionada, limitándose de manera genérica a invocar este
derecho, incumpliendo requisitos de forma y contenido; igualmente, los hechos descritos no
fueron debidamente relacionados con el derecho y garantía supuestamente lesionados, por lo que
las autoridades demandadas no vulneraron el derecho reclamado, sino se limitaron a cumplir su
obligación en correspondencia a la normativa vigente, habiendo efectuado una adecuada
valoración de los hechos y aplicado correctamente la norma.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se concluye


lo siguiente:

II.1. Por Resolución Determinativa GGSC-DJCC 431/2007 de 20 de diciembre, el Gerente a.i.


de GRACO Santa Cruz del SIN, resolvió determinar de oficio, entre otros, una deuda tributaria
por obligaciones impositivas al contribuyente SOAGSA en Bs10 653 028.-, por ingresos no
facturados correspondientes al IVA, IT e IUE por los periodos fiscalizados de junio de 2003 a
marzo de 2004; por IVA, IT e IUE por los periodos fiscales junio 2003 a marzo 2004, por ventas
a agencias publicitarias; e, IUE por los mismos periodos, por deducibilidad de pérdidas por
venta de activos fijos (fs. 1 a 13).

II.2. Impugnada la referida Resolución Determinativa en la vía judicial, el representante legal de


la SOAGSA dedujo demanda contenciosa tributaria contra la Gerencia de GRACO Santa Cruz
del SIN, que fue resuelta por el Juez Primero de Partido Administrativo, Coactivo Fiscal y
Tributario, declarando probada la demanda en su integridad, según Resolución 54 de 30 de
octubre de 2009, dejando sin valor alguno la Resolución Determinativa (fs. 14 a 19 y vta.).

II.3. Apelado el fallo por el Gerente a.i. de GRACO Santa Cruz del SIN, fue confirmada por la
Sala Social y Administrativa, mediante Auto de Vista 550 de 23 de diciembre de 2009 (fs. 20 a
21 y vta.).

II.4. Recurrido de casación en la forma y fondo el Auto de Vista 550, la Sala Social y
Administrativa Primera, mediante AS 239 de 12 de agosto de 2011, declaró infundado el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 658
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

recurso, señalando: a) La empresa SOAGSA, el 2 de abril de 2004, se acogió al Programa


Transitorio, Voluntario y Excepcional, bajo modalidad de Pago Único Definitivo, equivalente al
10% del total de las ventas brutas declaradas en un año; b) Dicho pago implica que la
administración Tributaria no pueda ejercer posteriormente sus facultades de fiscalización,
determinación y recaudación sobre impuestos y periodos comprendidos en el programa; c) El
plazo para acogerse al aludido Programa fue ampliado por Leyes 2626 y 2647 y DDSS 27369 y
27352, hasta el 14 de mayo de 2004, por lo que en aplicación de dicha normativa los adeudos
tributarios objeto del proceso quedaron extinguidos; y, d) El informe del auditor de juzgados,
corroboró la no procedencia de la Resolución Determinativa GGSC-DJCC 431/2007 (fs. 22 a 24
vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, denuncia la vulneración del derecho al debido proceso, aduciendo que las
autoridades demandadas usurparon funciones con la emisión del Auto Supremo impugnado, ya
que a través de él ampliaron el contenido del Programa Transitorio, Voluntario y Excepcional,
que supuestamente sólo estaba previsto para la regulación de cierto periodo; y sin la debida
motivación, declararon infundado su recurso de casación, legislando e interpretando el contenido
de leyes y decretos supremos previstos al efecto. En consecuencia, corresponde dilucidar en
revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, prevista en el art. 128 de la CPE, se instituye dentro del
nuevo orden constitucional, como una acción tutelar de defensa contra actos u omisiones
ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir derechos reconocidos por la misma
Constitución Política del Estado y la ley. Conforme a esta precisión, el contenido del art. 73 de
la LTCP.

La Norma Fundamental, enfatiza que esta acción tutelar puede presentarse por la persona
“…que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad
correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente,
siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados” (art. 129.I de la CPE).

III.2. Sobre la legitimación pasiva en la acción de amparo constitucional

Al efecto, corresponde expresar que la legitimación pasiva es la coincidencia que existe con la
calidad adquirida por un servidor público o persona individual o colectiva que presuntamente
con actos u omisiones ilegales o indebidas, ha provocado la restricción, supresión o la amenaza
de restringir o suprimir derechos y garantías constitucionales y contra quien se dirige la acción.
Así, la jurisprudencia y doctrina emitida por el Tribunal Constitucional anterior, que no es
contraria al nuevo orden constitucional, señaló que la legitimación pasiva es: “…la calidad que
(…) se adquiere por la coincidencia que se da entre la autoridad que presuntamente causó la
violación a los derechos y aquella contra quien se dirige la acción…” (SC 1349/2001-R de 20
de diciembre).

Entonces, la legitimación pasiva es la capacidad jurídica otorgada al particular, autoridad o


servidor público, a efectos de que pueda responder por los supuestos actos ilegales endilgados en
su contra; y en los casos en que los actos denunciados de lesivos a los derechos y garantías
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 659
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fundamentales sean cometidos dentro de un proceso judicial o administrativo, la legitimación


pasiva recaerá sobre el juez, tribunal u órgano que asumió la decisión, no obstante hubiera hecho
dejación del cargo, así como contra la nueva autoridad que ejerce el mismo. En ese sentido se ha
pronunciado el anterior Tribunal Constitucional en la SC 0761/2011-R de 20 de mayo, al referir
que: “ …en cuanto a la coincidencia que debe existir entre la autoridad demandada y la que
efectivamente cometió la vulneración de derechos fundamentales y garantías constitucionales,
cuando no se demanda al funcionario que a momento de la presentación de la demanda dejó de
ejercer las funciones desde las que cometió el supuesto acto ilegal sino al que se encontraba
fungiéndolas a momento de la presentación demanda, estableció lo siguiente:

'(…) cuando el funcionario o autoridad ya no ocupa el cargo en el que se encontraba cuando


ocasionó la lesión al derecho o garantía; en estos casos, la demanda debe dirigirse contra la
persona que en el momento de la presentación de la acción, se encuentra desempeñando esa
función, a quien sólo le alcanzarán las responsabilidades institucionales, más no así las
personales, si las hubiere. Al respecto la SC 0264/2004-R de 27 de febrero, estableció que: <La
legitimación pasiva es la calidad que se adquiere por la coincidencia que se da entre la
autoridad que causó la violación a los derechos y aquélla contra quien se dirige la acción;
empero, debe entenderse que la demanda debe estar dirigida contra la <<autoridad>> que
ostente el cargo desde el cual se realizó el acto ilegal o se incurrió en la omisión indebida, sin
que ello implique que, en caso de existir responsabilidades personalísimas, como la penal, el
funcionario que haya accedido al cargo con posterioridad al acto lesivo de derechos, tenga que
asumir las consecuencias únicamente por encontrarse en funciones al momento de iniciarse la
demanda y porque ésta haya sido dirigida en su contra (SC 1557/2010-R de 11 de octubre)>'”
(las negrillas nos corresponden).

III.3. La legitimación pasiva de los actuales Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia
en la acción de amparo constitucional

Dada la transformación sufrida por los entes que eran parte del Poder Judicial, con el fin de
adecuarse al nuevo orden constitucional asumido en Bolivia; el 16 octubre de 2011 se procedió a
la elección por voto directo de nuevas autoridades judiciales, tanto para el Tribunal Supremo de
Justicia, como para el Consejo de la Magistratura, Tribunal Agroambiental y Tribunal
Constitucional Plurinacional, proceso que de ninguna manera puede desconocer causas
existentes con anterioridad a la fecha de posesión de estas nuevas autoridades, el 3 de enero de
2012; habiendo el legislador, mediante la Ley 212, establecido un periodo de transición en el
cual todos los entes mencionados deberán concluir sus causas a través de sus Salas
Liquidadoras.

Con relación al Tribunal Supremo de Justicia, la referida Ley en su art. 8.II, señala que “Todas
las causas pendientes de resolución que se encuentren en la Corte Suprema de Justicia al 31 de
diciembre de 2011, serán resueltas por las Magistradas y Magistrados suplentes, hasta su
liquidación final en el plazo de treinta y seis meses, pudiendo la Sala Plena del Tribunal
Supremo de Justicia, de manera excepcional, ampliar este plazo hasta un máximo de doce meses
adicionales”; indicando de la misma manera, en su art. 9, respecto a las causas nuevas que: “Las
causas ingresadas al Tribunal Supremo de Justicia a partir del 3 de enero de 2012, serán
conocidas y resueltas por las Magistradas y los Magistrados titulares”.

De las normas antes referidas, resulta imperioso establecer dos situaciones: una relacionada con
un periodo de transición a efecto de liquidar las causas pendientes de resolución que ya no
pueden ser resueltas por las nuevas autoridades del Órgano Judicial de acuerdo a Ley; y otra, la
expresa delegación de la liquidación de causas a las magistradas y los magistrados suplentes de
todas las causas ingresas hasta el 31 de diciembre de 2011. En ese marco, de acuerdo con una
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 660
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

interpretación coherente con el espíritu de la Ley de Transición para el Tribunal Supremo de


Justicia, Tribunal Agroambiental, Consejo de la Magistratura y Tribunal Constitucional
Plurinacional, cualquier trámite que esté circunscrito a resolver aspectos relacionados con las
causas ingresadas hasta el 31 de diciembre de 2011, deben ser conocidas y resueltas por los
magistrados suplentes, quienes tienen competencia reconocida por Ley, resultando legalmente
impropio que cualquier trámite emergente de una causa anterior y que corresponda al periodo de
liquidación, sea de conocimiento de las autoridades titulares.

III.4. Análisis del caso concreto

De la lectura de la acción de amparo constitucional, se establece que la presente fue interpuesta


por Dionicio Cataldi Alanoca en representación de GRACO Santa Cruz del SIN, contra los ex
Ministros y los ahora Magistrados de la Sala Social del Tribunal Supremo de Justicia,
impugnando el Auto Supremo 239, por el cual se resolvió el recurso de casación interpuesto
contra el Auto de Vista 550, emitido por los entonces Ministros de la Sala Social y
Administrativa Primera, que ya hicieron dejación del cargo ante la elección y posesión de las
nuevas autoridades que ahora componen la Sala Social del indicado Tribunal.

Conforme a lo expuesto en el Fundamento Jurídico III.3, si bien los ex Ministros ostentarían


legitimación pasiva para ser demandados en la presente acción de amparo constitucional; sin
embargo, al tratarse de una causa tramitada antes del 31 de diciembre de 2011, cualquier
eventualidad relacionada a ella deberá ser resuelta necesariamente por los Magistrados
Liquidadores y no por las nuevas autoridades titulares, por existir imposibilidad legal de que
puedan conocer causas anteriores a su posesión.

En consecuencia, los Magistrados de la Sala Social del Tribunal Supremo de Justicia, carecen de
legitimación pasiva para ser demandados en la presente acción de amparo constitucional; toda
vez que por imperio de la ley, no pueden sustanciar causas anteriores a la fecha de su posesión,
siendo así que la legitimación pasiva, no sólo consiste en la relación que debe existir entre la
autoridad que supuestamente ocasionó la lesión a los derechos y garantías y aquella contra quien
se dirige la acción, sino reside también en que debe estar dirigida, además, contra la autoridad
que pueda subsanar o enmendar el supuesto acto ilegal.

No obstante de lo antes expresado, en el caso presente, al no haberse ingresado al fondo de la


problemática planteada, se salva el derecho que tiene el accionante de dirigir la acción también
contra los Magistrados suplentes del Tribunal Supremo de Justicia que fungen como
liquidadores, tomando en cuenta el plazo de caducidad previsto para esta acción, conforme al
art. 129.II de la CPE y su interrupción producida por la interposición del presente amparo
constitucional.

Por lo expuesto precedentemente, no es posible ingresar al análisis de fondo de la problemática


planteada, como tampoco es viable otorgar la tutela solicitada, siendo correcta la actuación del
Tribunal de garantías, al haber denegado la acción de amparo constitucional, aunque con otros
fundamentos.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve: APROBAR la Resolución 62/012 de 15 de febrero de 2012, cursante de fs. 212 a 214
vta., pronunciada por la Sala Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca; y en
consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, sin perjuicio de que la parte accionante pueda
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 661
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

interponer nuevamente su acción, dirigiéndola contra las autoridades que conforme a los
Fundamentos Jurídicos de este fallo, ostentan legitimación pasiva.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0108/2012


Sucre, 27 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00073-2012-01-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 08/2012 de 30 de enero, cursante de fs. 546 a 552, pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Oscar Rea Condarco y Elizabeth
Jannone de Saucedo contra Miryam Aguilar Rodríguez y Juan Carlos Berrios Albizu,
Presidentes de las Salas Social y Administrativa Primera y Civil Segunda,
respectivamente, del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 13 de enero de 2012, cursante de fs. 482 a 497 vta., los
accionantes señalaron lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Refieren que Jorge Federico Céspedes Toro les inició dos procesos ordinarios, el primero de
Resolución de contratos de compraventa de acciones de la empresa inmobiliaria “Casa de
Campo” S.A., suscritos el 15 de diciembre de 2005 y el 31 de julio de 2007; y, el segundo de
nulidad de los mismos; procesos que se acumularon en el Juzgado Noveno de Partido en lo Civil
y Comercial del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

Agregan que, después de responder en forma negativa a la demanda y reconvenir a la acción, el


demandante mediante su apoderado legal, Javier Fernando Camacho Pinto, al amparo del art.
169 del Código de Procedimiento Civil (CPC), solicitó que como medida precautoria, se ordene
al demandado, Oscar Rea Condarco, abstenerse de realizar actos de disposición y representación
de las cuatro mil seiscientas ochenta y seis acciones de propiedad de su representado, y al mismo
tiempo, “para evitar que esas acciones perdieran su representación al interior de la sociedad, se
conceda a su persona la representación legal ante la sociedad y ante terceros de las 4686
acciones”(sic). Solicitud que previa aceptación de contracautela, se le concedió de manera
parcial mediante Auto de 24 de mayo de 2010, en el que se dispuso que una vez registrada la
contracautela en Derechos Reales (DD.RR.), se notifiquen al demandado para que se abstenga
de realizar ningún acto de disposición de las citadas acciones e igualmente a la coaccionante en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 662
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

su condición de Presidenta del Directorio de la Sociedad Anónima, para su conocimiento y


cumplimiento; sin dar respuesta a la representación legal peticionada en el mismo memorial.

Por lo expuesto, el 2 de junio de 2010, el demandante Jorge Federico Céspedes Toro pidió
complementación del Auto de 24 de mayo del mismo año, el cual fue rechazado por providencia
de 5 de junio de 2010, motivo por el cual, contra el citado Auto, María del Rosario Santa Cruz
por Jorge Céspedes Toro, planteó recurso de reposición bajo alternativa de apelación,
demandando una vez más que se otorgue la representación legal provisional al abogado de su
defendido. Por su parte, los demandados, ahora accionantes, interpusieron el mismo recurso
contra el citado Auto de 24 de mayo, requiriendo que se deje sin efecto el mismo y por ende, la
medida precautoria adoptada; recursos que se resolvieron mediante Resolución 250/2010 de 17
de noviembre, pronunciada por el Juez Noveno de Partido en lo Civil y Comercial, autoridad
que dispuso haber lugar parcialmente a la reposición formulada por la parte demandante,
dejando sin efecto legal la providencia de 5 de junio y complementando el Auto de 24 de mayo,
ambos de 2010, determinando restringir y limitar los derechos reconocidos por el art. 269 del
Código de Comercio (Ccom), respecto a Oscar Rea Condarco, en su condición de accionista de
la mencionada empresa, no pudiendo el mismo, dentro de ella, efectuar ningún acto que conlleve
modificar, cambiar, sustituir, gravar y efectuar actos de disposición u otro semejante con
respecto a las cuatro mil seiscientas ochenta y seis acciones; asimismo, declaró no haber lugar al
recurso de reposición formulado por el apoderado del demandado respecto al Auto de 24 de
mayo de 2010, manteniéndose el mismo; y, concediendo en consecuencia, la apelación
alternativamente planteada.

Una vez sorteados los recursos de apelación planteados por ambas partes, la Sala Civil Segunda,
conformada por las autoridades jurisdiccionales ahora demandadas, pronunció la Resolución I-
371/11 de 25 de julio de 2011, por la que, acumulando los dos recursos, resolvió confirmar el
Auto de 24 de mayo de 2010 y la Resolución 250/2010 “…complementando a su vez, en
sentido de que se otorga provisionalmente la representación legal de las 4686 acciones de la
Empresa Inmobiliaria Casa de Campo S.A., registradas actualmente a nombre de Oscar Rea
Condarco, a favor de Javier Camacho Pinto, representante de Jorge Federico Céspedes Toro, no
pudiendo estos últimos ejercitar acto alguno de disposición sobre las acciones señaladas…”
(sic), bajo el sustento que el accionista tiene el derecho de intervenir en las juntas generales con
derecho a voz y voto, derecho que “…en caso de no limitarse puede poner en Grave riesgo el
cumplimiento de una eventual sentencia a ser pronunciada en la presente causa…” (sic), toda
vez que dicha instancia es el órgano máximo de decisión de una Sociedad Anónima y tiene
facultades para tomar determinaciones “…no solamente relacionadas con la disposición de
activos o bienes de la sociedad sino incluso con su existencia misma, puesto que compete a estas
juntas adoptar determinaciones sobre elección de directores, distribución de utilidades,
tratamiento de pérdidas, modificación de estatutos y además la disolución anticipada de la
sociedad; por lo que, en consideración a la naturaleza del presente proceso, resulta necesario
atender la solicitud contenida en el recurso planteado por la parte demandante” (sic).

Complementación que denuncian como acto ilegal que motiva el presente amparo
constitucional, porque a su criterio, les quitaron la representación legal de las acciones de la
empresa inmobiliaria “Casa de Campo S.A.”, asignando la misma, por derecho propio, a un
tercero que no es parte del proceso y sin que concluya el juicio de nulidad en todas sus etapas
procesales y exista cosa juzgada sobre el mismo, provocando que una medida que debía ser
producto de una sentencia ejecutoriada, sea adoptada al comienzo del proceso, sin considerar
además que el monto cancelado hasta el momento por las acciones, consolida el derecho
propietario a favor del comprador de acuerdo a la adenda de 31 de julio de 2007; confiriendo de
esta manera al apoderado del demandante, una representación que ni el mismo actor le
encomendó en su poder 22/2010, instrumento en el que no se le concedió facultad para solicitar
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 663
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

una medida precautoria de esa naturaleza, porque se trata de un simple apoderado procesal,
convirtiendo dicha medida en una confiscación o una expropiación del derecho de titularidad
sobre las citadas acciones.

Al margen de lo señalado, denuncian que la Sala Civil Segunda en su Resolución, no consideró,


ni se pronunció que el art. 196 inc. 2) del CPC, establece la facultad del juez que en el término
de veinticuatro horas pueda corregir cualquier error material, aclarar y suplir cualquier omisión
de la sentencia, sin embargo, los autos interlocutorios que resolvieron las medidas precautorias
desconocieron la citada normativa al igual que los arts. 215 y 216 del CPC; por lo que, la
complementación de 2 de junio de 2010 al Auto de 24 de mayo del mismo año, es ilegal por
haberse presentado fuera de término, en consecuencia, todo actuado posterior sería nulo.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Los accionantes en mérito a los aspectos desarrollados supra, denuncian la vulneración de sus
derechos al debido proceso, a la defensa, a la garantía del juicio previo, a la “seguridad jurídica”,
a la propiedad privada, a dedicarse al comercio, a la industria o a cualquier actividad económica
lícita y de asociación; citando al efecto los arts. 9.2; 21.4; 23.I; 47.I; 56.I y II; 115.I; 116.I; 117.I
y 119.I y II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

De acuerdo a lo expuesto, plantean acción de amparo constitucional solicitando se conceda la


tutela impetrada, declarando la nulidad de la Resolución I-371/11 de 25 de julio y del Auto
complementario de 12 de agosto, ambos de 2011, y “disponiendo que las autoridades recurridas
dicten una nueva Resolución de acuerdo con los fundamentos legales expuestos en la Sentencia
Constitucional que conceda la tutela, reponiendo los derechos fundamentales que corresponden
a Oscar Rea Condarco de acuerdo al art. 269 del C.Com. como titular de las 4686 acciones de la
Empresa Inmobiliaria Casa de Campo S.A. con costas” (sic).

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 30 de enero de 2012, en presencia de la parte accionante,


terceros interesados y en ausencia de las autoridades demandadas y del Ministerio Publico,
conforme consta en el acta cursante de fs. 539 a 545 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

Los accionantes mediante su abogado, ampliando su demanda, en audiencia refirieron: a) El


poder otorgado por Jorge Federico Céspedes Toro a favor de su abogado Javier Fernando
Camacho Pinto, no faculta a este último para pedir, como medida precautoria, la representación
de las acciones de la Sociedad Anónima, como tampoco para actuar al interior de esta,
únicamente para actuar ante las autoridades jurisdiccionales; b) El Juez Noveno de Partido en lo
Civil y Comercial, mediante Resolución, concedió la medida precautoria, limitando la libre
disposición de las acciones a Oscar Rea Condarco y Jannone de Saucedo, avasallando su
derecho de propiedad como titulares de esas acciones, cuando el art. 269 del Ccom establece los
derechos que confiere la ley a todo accionista, que entre otros son, intervenir en las juntas
generales con derecho a voz y a voto, integrar los órganos electivos de administración, participar
de las actividades sociales y en la deuda social en caso de liquidación, gozar de preferencia de
nuevas acciones, impugnar las resoluciones de las juntas generales y elegir al directorio así
como negociar libremente sus acciones; y, conforme al art. 275 del citado cuerpo legal, toda
disposición que restrinja la libertad estatutaria, es nula; y, c) La complementación inmersa en el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 664
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Auto que resolvió el recurso de apelación, desconoció lo establecido por los arts. 268, 269, 274,
275, 278 y 288 del Ccom y 169 del CPC.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Miryam Aguilar Rodríguez y Juan Carlos Berrios Albizu, Presidentes de las Salas Social y
Administrativa Primera y Civil Segunda, respectivamente, del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz, ahora demandados, en su informe escrito, cursante de fs. 502 a 503,
sostuvieron lo siguiente: 1) El 25 de julio de 2011, pronunciaron el Auto de Vista I-371/11, por
el que confirmaron el Auto de 24 de mayo de 2010 y la Resolución 250/2010,
“…complementando a su vez, en sentido de que se otorga provisionalmente la representación
legal de las 4686 acciones de la Empresa Inmobiliaria Casa de Campo S.A. registradas a nombre
de Oscar Rea Condarco, a favor de Javier Camacho Pinto representante de Jorge Federico
Céspedes Toro, determinándose que estos últimos no pueden ejercitar actos de disposición sobre
las acciones señaladas…” (sic); 2) La decisión fue asumida considerando que el apoderado del
demandante solicitó la representación legal provisional de todas las acciones de la empresa
inmobiliaria “Casa de Campo” S.A., arguyendo el inminente peligro que sufrirían de ser
enajenadas o afectadas si no se diere curso a su solicitud; 3) Asimismo, se tomó en cuenta lo
establecido en el art. 269 inc. 1) del Ccom referida a los derechos del accionista; 4) Con relación
a los agravios esgrimidos por los demandados, se estableció que, si bien el departamento
ofrecido en calidad de contracautela es de propiedad de Javier Camacho Pinto, el mismo resulta
ser apoderado de Jorge Federico Céspedes Toro, quien basado en la autonomía de su voluntad y
las facultades que le otorga el poder 22/10, puede ejercitar todos los actos procesales necesarios
e inherentes como disponen las normas sustantivas y adjetivas sin limitación, determinándose
que previamente se proceda al registro de la contracautela en Derechos Reales; y, 5) Por Autos
de 8 y 12 de agosto de 2011, se estableció no haber lugar a la aclaración, complementación y
explicación solicitadas por Javier Fernando Camacho Pinto, Oscar Rea Condarco y Elizabeth
Jannone de Saucedo, respectivamente.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El tercero interesado, Jorge Federico Céspedes Toro, mediante su abogado, en audiencia, refirió:
i) Los documentos objeto del proceso, no son de transferencia de acciones, sino simplemente se
trata de contratos de compromiso de compraventa; ii) De la lectura de la clausula 6.1, se
establece que la transferencia de las cuatro mil seiscientos ochenta y seis acciones se
perfeccionará en el momento del pago del precio acordado mediante el endoso de las acciones al
portador; sin embargo, nunca se produjo el pago total de los $us620 000.- (seiscientos veinte mil
dólares estadounidenses) adeudados; por lo tanto, la citada transferencia nunca se consolidó; iii)
En tanto no se perfeccione la transferencia de las cuatro mil seiscientas ochenta y seis acciones,
Jorge Federico Céspedes Toro, es el único propietario real, absoluto y perfecto de las mismas,
por ende, puede otorgar un poder limitado que faculte en nombre de las acciones que están
siendo transferidas, tanto en las actividades societarias como en defensa de los intereses de la
sociedad; iv) El testimonio de poder en base al cual se inició la acción de nulidad, expresamente
determina entre sus facultades, la de solicitar medidas precautorias de todo tipo, además de
ofrecer contracautela, por lo que no se puede alegar que su persona hubiera excedido las
facultades conferidas por el titular; v) Elizabeth Jannone de Saucedo y Oscar Rea Condarco, en
forma ilegal, registraron su título accionario como si ellos fueran accionistas, solamente para
utilizarlo como garantía de un préstamo ante el Banco Mercantil; vi) El carácter fundamental de
las medidas precautorias es su provisionalidad; en consecuencia, no causan estado, es más,
pueden ser revisadas, modificadas o dejadas sin efecto en cualquier estado del proceso;
consiguientemente, no se puede alegar lesión a ningún derecho constitucional cuando son
medidas que solamente tienden a proteger provisionalmente un derecho reclamado; vii) El
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 665
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Tribunal de alzada se limitó a aplicar el art. 169 del CPC, que en forma no taxativa ni limitativa
establece la posibilidad de asumir las medidas precautorias que a criterio del Juez sean
pertinentes para asegurar o proteger derechos modificados, en ningún momento excedió sus
facultades al otorgar la representación provisional; viii) Conforme al Código de Comercio, las
juntas extraordinarias de accionistas pueden tomar cualquier tipo de determinación referente a la
venta de activos de una sociedad anónima o la obtención de préstamos o de alguna manera
afectar o gravar los bienes de la misma; en el presente caso, si los accionantes registraron
ilegalmente las acciones a su nombre, es justo y lógico prever que puedan asumir cualquier acto
de disposición que pueda afectar sus derechos; y, ix) La medida precautoria no llegó en ningún
momento a modificar o establecer alguna limitación a los Estatutos de la Sociedad Anónima,
siendo argumento inadmisible, pues, cuando se trata de acciones dadas en prenda o usufructo, es
el propietario quien debe presentar las acciones en junta de accionistas, son acciones que Jorge
Federico Céspedes Toro pretende representarlas en la junta de accionistas porque ese es el
mandato.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, pronunció la


Resolución 08/2012 de 30 de enero, cursante de fs. 546 a 552, por la cual denegó la tutela
solicitada; argumentando lo que sigue: a) No se demostró de manera clara, precisa y concreta de
qué manera se vulneró el derecho al debido proceso del accionante, quien se limitó a efectuar
una relación de antecedentes del proceso civil que originó la presenta acción; b) Un Tribunal de
garantías no se encuentra facultado para ordenar a una autoridad ordinaria que dicte una
determinada forma de resolución; c) La acción de amparo constitucional no constituye una
nueva instancia procesal de la jurisdicción común; d) El art. 156 del CPC, establece que antes de
presentarse la demanda o durante la sustanciación de la misma, pueden pedirse las medidas
precautorias. Norma concordante con el art. 169 del mismo cuerpo adjetivo civil, que autoriza la
adopción de medidas conducentes al resguardo de activos y acciones cuya existencia en interés
del proceso, tiene la finalidad de asegurar el resultado probable de la sentencia; e) Las
autoridades demandadas actuaron conforme a procedimiento y correctamente, dado que no es
evidente que la aplicación de una medida precautoria dentro de un proceso judicial ordinario
equivalga a una sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada y tenga los mismos efectos que
una sentencia constitutiva; f) El poder 22/2010 otorgado a favor del abogado del demandante,
faculta al mandatario a solicitar medidas precautorias de todo tipo y ofrecer contracautela; g) No
se vulneró el debido proceso al otorgar provisionalmente la representación legal de las acciones
al apoderado legal de Jorge Federico Céspedes Toro; h) Tampoco existe lesión al derecho al
comercio, porque en ningún momento se le restringió ejercer el mismo; e, i) El hecho de
nombrar un apoderado legal de las acciones y restringir las facultades de Oscar Rea Condarco,
no implica que hubiere sido desafectado de la sociedad “Casa de Campo” S.A., porque las
medidas asumidas son de carácter temporal y variable.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Cursa contrato de compraventa y devolución de acciones de la sociedad empresa


inmobiliaria “Casa de Campo” S.A. de 15 de diciembre de 2005, debidamente reconocido ante
Notario de Fe Pública 2, suscrito entre Jorge Federico Céspedes Toro (vendedor) y Elizabeth
Jannone de Saucedo, por la venta de cuatro mil seiscientas ochenta y seis acciones, en el monto
de $us620 000, a cancelarse mediante plan de pagos (fs. 4 a 9).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 666


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. Al contrato de compraventa y devolución de acciones de 15 de diciembre de 2005, el 31 de


julio de 2007, se le insertó un addendum celebrado entre Jorge Federico Céspedes Toro,
Elizabeth Jamone de Saucedo y Oscar Rea Condarco por la venta de las citadas acciones por el
mismo monto, acordando que para efectos de los contratos originales y adenda, se tendrá como
comprador y obligado principal a Oscar Rea Condarco y a Elizaberth Jannone de Saucedo como
codeudora solidaria y mancomunada de todas las obligaciones asumidas por el comprador (fs.
11 a 15).

II.3. Mediante memorial presentado el 18 de marzo de 2010 ante el Juzgado de Partido de turno
en lo Civil y Comercial del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, Javier Fernando
Camacho Pinto, en representación legal de Jorge Federico Céspedes Toro, conforme al poder
especial y suficiente 22/2010 de 28 de enero, interpuso demanda ordinaria de nulidad de
documento contra Oscar Rea Condarco y Elizaberth Jannone de Saucedo (fs. 19 a 21), causa que
debido a una recusación formulada contra el Juez de la causa, se remitieron obrados al Juzgado
Octavo de Partido en lo Civil y Comercial (fs. 28), radicada el 12 de mayo del mismo año (fs.
51).

II.4. La Jueza Octava de Partido en lo Civil y Comercial, mediante Auto de 24 de mayo de


2010, dio por apersonado al proceso a Javier Fernando Camacho Pinto apoderado legal de Jorge
Federico Céspedes Toro, y admitió la contracautela ofrecida por el primero de los citados,
consistente en un bien inmueble de su propiedad, departamento en propiedad horizontal ubicado
en el piso quinto, signado con el número 503 y la baulera 16, inscritos en DD.RR bajo los Folios
Reales 2.01.0.99.0015128 y 2.01.0.99.0015129, respectivamente, ambos ubicados en el edificio
Belisario Salinas entre 6 de Agosto y 20 de Octubre, disponiendo el registro de la misma ante la
oficina de Derechos Reales; ordenando además, que en la vía de medida precautoria, se
notifique al demandado Oscar Rea Condarco para que se abstenga a realizar actos de disposición
de las acciones objeto del proceso, así como la notificación a Elizaberth Jannone de Saucedo en
su condición de Presidenta del Directorio de la Sociedad Anónima Empresa Inmobiliaria “Casa
de Campo” S.A. (fs. 72).

II.5. El 4 de junio de 2010, Javier Fernando Camacho Pinto, abogado y apoderado de Jorge
Federico Céspedes Toro, solicitó complementación del Auto de 24 de mayo del citado año,
pidiendo que adicionalmente a lo determinado por el Juez de la causa, se conceda a su persona
en forma provisional, la representación legal del total de las acciones, ante los órganos internos
de la empresa inmobiliaria Casa de Campo S.A. y ante terceros (fs. 75 y vta.), escrito que
mereció decreto de 5 de junio, mediante el cual, se le señaló que se esté a lo dispuesto en el Auto
de 24 de mayo (fs. 76).

II.6. Por recusación planteada contra la Jueza Octava de Partido en lo Civil y Comercial, el 7 de
septiembre de 2010, se remitieron obrados originales ante el Juzgado similar Noveno (fs. 99).
Instancia ante la cual, mediante memorial de 9 de junio de 2010, María del Rosario Santa Cruz
en representación de Jorge Federico Céspedes Toro, planteó recurso de reposición contra el
Auto de 24 de mayo de 2010, solicitando una vez más que se otorgue la representación legal
provisional de las acciones objeto del proceso a Javier Fernando Camacho Pinto en calidad de
abogado apoderado del actor (fs. 83 a 85 vta.).

II.7. Carlos Pinilla en representación legal de Oscar Rea Condarco y Elizabeth Jannone de
Saucedo, por memorial de 21 de septiembre de 2010, interpuso recurso de reposición con
alternativa de apelación contra el Auto de 24 de mayo de 2010, solicitando dejar sin efecto el
mismo y; en consecuencia, la medida precautoria de prohibición de innovar sobre las cuatro mil
seiscientos ochenta y seis acciones de la empresa inmobiliaria “Casa de Campo” S.A. (fs. 104 a
105).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 667
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.8. Mediante Resolución 250/2010, el Juez Noveno de Partido en lo Civil y Comercial, declaró
haber lugar parcialmente a la reposición formulada por María del Rosario Santa Cruz, apoderada
de Jorge Federico Céspedes Toro, dejando sin efecto legal la providencia de 5 de junio de 2010
y complementó el Auto de 24 de mayo de ese mismo año, determinando restringir y limitar los
derechos reconocidos por el art. 268 del Ccom, con respecto a Oscar Rea Condarco en su
condición de accionista de la empresa inmobiliaria “Casa de Campo” S.A., no pudiendo el
mismo dentro de ella, efectuar ningún acto que conlleve a modificar, cambiar, sustituir, gravar y
efectuar actos de disposición u otro semejante con respecto a las acciones dentro la referida
sociedad. Por los razonamientos expuestos se declaró haber lugar al recurso de reposición
formulado Carlos Pinilla en representación de Oscar Rea Condarco y Elizabeth Jannone de
Saucedo (fs. 118 a 120 vta.).

II.9. Habiéndose interpuesto por ambas partes recurso de apelación alternativamente a la


reposición interpuesta, se radicaron las mismas en la Sala Civil Segunda, resueltas por
Resolución I-371/11; mediante la cual, se confirmó el Auto de 24 de mayo de 2010 y la
Resolución 250/2010, “…complementando a su vez, en sentido de que se otorga
provisionalmente la representación legal de las 4686 acciones de la Empresa Inmobiliaria Casa
de campo S.A. registradas actualmente a nombre de Oscar Rea Condarco, a favor de Javier
Camacho Pinto representante de Jorge Federico Céspedes Toro, no pudiendo estos últimos
ejercitar acto alguno de disposición sobre las acciones señaladas…” (sic), aclarándose en la
parte final que con la finalidad de evitar duplicidad de fallos y contradicciones, se procede a la
acumulación de las apelaciones interpuestas (fs. 277 a 278).

II.10.Contra la Resolución I-371/11, Carlos Pinilla por Oscar Rea Condarco y Elizabeth
Jannone de Saucedo, el 11 de agosto de 2011 solicitó explicación y complementación sobre los
siguientes puntos: 1) Por qué se suprimieron los derechos esenciales de un accionista; 2) Por qué
en la vía precautoria se desconocieron todos los atributos del derecho de propiedad de un
accionista sobre sus acciones; 3) Por qué va más allá de ese derecho, cuando se produce una
especie de secuestro de acciones de Oscar Rea Condarco, suprimiendo su representación en las
juntas generales de accionistas con derecho a vos y voto, por qué se está anticipando la
ejecución de una sentencia inexistente cediendo la totalidad de los derechos de su mandante, ya
que no se probó todavía la verosimilitud de su demanda; y, 4) Se expliquen los criterios que se
han tenido para decretar la medida precautoria, al no responder a su finalidad (fs. 283 a 285),
resuelta por Auto de 12 del mismo mes y año citados, por el que, el Tribunal de alzada resolvió,
no haber lugar a la petición formulada (fs. 286).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Corresponde ahora precisar, el problema jurídico planteado; en ese orden, se tiene que el objeto
de la presente acción de amparo, es la petición de tutela constitucional para el resguardo de los
derechos al debido proceso legal, a la defensa, a la garantía del juicio previo, a la “seguridad
jurídica” a la propiedad privada, a dedicarse al comercio a la industria o cualquier actividad
económica lícita y a la asociación; la causa o actos denunciados como lesivos, son la
Resolución I-371/11 y el Auto complementario de 12 de agosto de 2011, emitidos por la Sala
Civil Segunda a tiempo de resolver las apelaciones planteadas por las partes del proceso,
mediante las que se complementó la Resolución del Juez de primera instancia, adicionando la
otorgación de la representación legal del total de las acciones objeto de litigio, al abogado
apoderado de la parte demandante, lo cual consideran irrazonable, porque a su criterio, se estaría
otorgando a dicho sujeto procesal todos los derechos que hacen al titular de una acción sin que
venza en el proceso. En consecuencia, en base a los aspectos antes señalados, se analizará si en
el presente caso, corresponde la concesión o no de la tutela solicitada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 668


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.1. La acción de amparo y su configuración constitucional

El orden constitucional boliviano, dentro de las acciones de defensa, instituye en su art. 128 la
acción de amparo constitucional como un mecanismo de defensa que tendrá lugar contra los
“actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley”.

Del contenido del texto constitucional de referencia, puede inferirse que la acción de amparo
constitucional es un mecanismo de defensa jurisdiccional, eficaz, rápido e inmediato de
protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, cuyo ámbito se
circunscribe respecto de aquellos derechos fundamentales y garantías que no se encuentran
resguardados por los otros mecanismos de protección que el mismo orden constitucional brinda
a los bolivianos, como la acción de libertad, de protección de privacidad, popular, de
cumplimiento, etc. Asimismo, desde el ámbito de los actos contra los que procede, esta acción se
dirige contra aquellos actos y omisiones ilegales o indebidos provenientes no sólo de los
servidores públicos, sino también de las personas individuales o colectivas que restrinjan o
amenacen restringir los derechos y garantías objeto de su protección.

En este contexto, la acción de amparo constitucional en su dimensión procesal, se encuentra


concebido como una acción que otorga a la persona la facultad de activar la justicia
constitucional en defensa de sus derechos fundamentales y garantías constitucionales.

El término de acción no debe ser entendida como un simple cambio de nomenclatura, que no
incide en su naturaleza jurídica, pues se trata de una verdadera acción de defensa inmediata,
oportuna y eficaz para la reparación y restablecimiento de los derechos y garantías
fundamentales, y dada su configuración, el amparo constitucional se constituye en un proceso
constitucional, de carácter autónomo e independiente con partes procesales diferentes a las del
proceso ordinario o por lo menos con una postura procesal distinta, con un objeto específico y
diferente, cual es la protección y restitución de derechos fundamentales y con una causa distinta
a la proveniente del proceso ordinario, esto es, la vulneración concreta o inminente de derechos
fundamentales a raíz actos y omisiones ilegales o indebidos y con un régimen jurídico procesal
propio.

En este orden de ideas, la acción referida, adquiere las características de sumariedad e


inmediatez en la protección, por ser un procedimiento rápido, sencillo y sin ritualismos
dilatorios. A estas características se añade la de generalidad, a través de la cual la acción puede
ser presentada sin excepción contra todo servidor público o persona invididual o colectiva.

Finalmente, cabe señalar que dentro de los principios procesales configuradores del amparo
constitucional, el constituyente resalta la inmediatez y subsidiariedad al señalar en el art. 129.I
de la CPE que esta acción “…se interpondrá siempre que no exista otro medio o recurso legal
para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados”.

Lo señalado implica que esta acción forma parte del control reforzado de constitucionalidad o
control tutelar de los derechos y garantías al constituirse en un mecanismo constitucional
inmediato de carácter preventivo y reparador destinado a lograr la vigencia y respeto de los
derechos fundamentales y garantías constitucionales, siempre que no exista otro medio de
protección o cuando las vías idóneas pertinentes una vez agotadas, no han restablecido el
derecho lesionado, lo que significa que de no cumplirse con este requisito, no se puede analizar

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 669


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

el fondo del problema planteado y, por tanto, tampoco otorgar la tutela (SCP 0002/2012 de 13
de marzo).

III.2. Los límites de la jurisdicción constitucional con respecto a la ordinaria

A la luz de la Constitución Política del Estado, el Tribunal Constitucional Plurinacional está


previsto como una instancia independiente del órgano judicial; estableciéndose así del título III,
Capitulo Primero de la Ley Fundamental, denominado Órgano Judicial y Tribunal
Constitucional Plurinacional, efectuando una clara distinción entre ambos.

En efecto, de la interpretación literal del citado Título, en su art. 178, se instituyen los principios
que sustentan la potestad de administrar justicia: independencia, imparcialidad, seguridad
jurídica, publicidad, probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo jurídico, interculturalidad,
equidad, servicio a la sociedad, participación ciudadana, armonía social y respeto de los
derechos.

Por su parte, el art. 179 de la Ley Fundamental, determina que la función judicial es única y
especifica a las diferentes jurisdicciones: ordinaria, agroambiental, indígena originaria
campesina y jurisdicciones especializadas. El parágrafo III, sostiene que: “La justicia
constitucional se ejerce por el Tribunal constitucional Plurinacional”; empero, no establece que
éste forme parte del órgano judicial, que por el contrario el parágrafo IV, expresamente dispone
que el Consejo de la Magistratura es parte del Órgano Judicial; concluyéndose que el Tribunal
Constitucional Plurinacional está concebido como un órgano jurisdiccional especializado,
reservado únicamente a impartir justicia constitucional e independiente, que tiene como
objetivos: velar por la supremacía de la Constitución Política del Estado, ejercer el control de
constitucionalidad y precautelar el respeto y la vigencia de los derechos y garantías
constitucionales, tal cual lo establece el art. 169.I de la CPE; consecuentemente, en mérito a lo
citado precedentemente, el Tribunal Constitucional Plurinacional, es el encargado de ejercer el
control de constitucionalidad en los diferentes ámbitos normativo, tutelar y competencial; y por
lo mismo, ningún órgano está exento del control, el cual, sin embargo, con la finalidad de no
invadir competencias exclusivas de otros órganos, debe estar debidamente limitado.

En ese contexto, la jurisdicción constitucional dentro del marco de la Constitución Política del
Estado, tiene competencia para conocer, dentro de las acciones de amparo constitucional, las
resoluciones pronunciadas por los jueces y tribunales de la jurisdicción ordinaria, agroambiental,
indígena originaria campesina, cuando se lesionan derechos fundamentales y garantías
constitucionales; empero, ese control debe estar limitado por ciertos parámetros con la finalidad
de no invadir las competencias de la jurisdicción ordinaria.

III.3. La interpretación de la legalidad ordinaria y el ámbito de competencia de la


jurisdicción constitucional

En coherencia con el fundamento precedentemente expuesto, el Tribunal Constitucional,


respecto a la interpretación de la ley o la indebida aplicación de ella, en la SC 1358/2003-R de
18 de septiembre, determinó lo siguiente: “…el amparo constitucional es una acción de
carácter tutelar, no es un recurso casacional que forme parte de las vías legales ordinarias, lo
que significa que sólo se activa en aquellos casos en los que se supriman o restrinjan los
derechos fundamentales o garantías constitucionales, por lo mismo no se activa para reparar
supuestos actos que infringen las normas procesales o sustantivas, debido a una incorrecta
interpretación o indebida aplicación de las mismas”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 670


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Para que el Tribunal Constitucional Plurinacional cumpla su labor de revisión de la


interpretación efectuada por la jurisdicción ordinaria, la SC 0718/2005-R de 28 de junio,
estableció que es necesario que: “…la parte procesal, que se considera agraviada con los
resultados de la interpretación porque lesionan sus derechos fundamentales, exprese de manera
adecuada y precisa los fundamentos jurídicos que sustenten su posición, fundamentos en los que
deberá exponer con claridad y precisión los principios o criterios interpretativos que no fueron
cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y
consiguiente aplicación de la norma interpretada; asimismo, exponer qué principios
fundamentales o valores supremos no fueron tomados en cuenta o fueron desconocidos por el
intérprete al momento de desarrollar la labor interpretativa y asumir la decisión impugnada;
pues resulta insuficiente la mera relación de hechos o la sola enumeración de las normas
legales supuestamente infringidas; porque sólo en la medida en que el recurrente expresa
adecuada y suficientemente sus fundamentos jurídicos la jurisdicción constitucional podrá
realizar la labor de contrastación entre la interpretación legal realizada por la jurisdicción
ordinaria y los fundamentos que sustentan la interpretación y las conclusiones a las que arribó,
con los fundamentos y pretensiones expuestos por el recurrente del amparo constitucional”.

“Conforme a ello, y atendiendo a que la jurisdicción constitucional sólo puede analizar la


interpretación efectuada por los jueces y tribunales ordinarios cuando se impugna tal labor
como irrazonable, es necesario que el recurrente, en su recurso, a tiempo de cuestionar la
interpretación de la legalidad ordinaria: 1) Explique por qué la labor interpretativa impugnada
resulta insuficientemente motivada, arbitraria, incongruente, absurda o ilógica o con error
evidente, identificando, en su caso, las reglas de interpretación que fueron omitidas por el
órgano judicial o administrativo, y 2) Precise los derechos o garantías constitucionales que
fueron lesionados por el intérprete, estableciendo el nexo de causalidad entre éstos y la
interpretación impugnada; dado que sólo de esta manera la problemática planteada por el
recurrente, tendrá relevancia constitucional” (SC 0085/2006-R de 25 de enero).

De los razonamientos expuestos por la jurisprudencia constitucional glosada precedentemente,


se concluye que la jurisdicción constitucional únicamente conocerá aquellas acciones donde la
interpretación ordinaria de las leyes quebranten o vulneren derechos y garantías
constitucionales, claramente expresados al momento de solicitar la tutela correspondiente,
habida cuenta que si bien la interpretación de la legalidad ordinaria es una labor y facultad de la
jurisdicción común, no es menos evidente que corresponde a la jurisdicción constitucional
verificar si en esa labor interpretativa no se han quebrantado los principios constitucionales
uniformadores del ordenamiento jurídico, entre ellos, los de legalidad, seguridad jurídica,
igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y debido proceso; sin embargo, para que esta
jurisdicción abra su ámbito de tutela, es imprescindible que aquella parte que pretende la tutela,
exprese de manera clara, precisa y concreta, de qué manera esa interpretación resulta irrazonable
ya sea por contener motivación insuficiente, arbitraria, incongruente, absurda o ilógica, o con
error evidente, identificando en el caso concreto, cuáles son las reglas de interpretación omitidas
en la jurisdicción común, estableciendo la relación de causalidad entre el hecho que sirve de
fundamento y la lesión causada al derecho o garantía.

Dicho de otro modo, la interpretación de la legalidad ordinaria o de las normas legales infra
constitucionales, es atribución exclusiva de los jueces y tribunales ordinarios; no siendo posible
que esta interpretación sea conocida por la jurisdicción constitucional como una instancia de
casación; siendo únicamente objeto de análisis cuando efectivamente el caso concreto alcanza
relevancia constitucional, por evidente afectación a algún derecho fundamental o garantía
constitucional. Consideraciones expuestas que condicen con lo establecido por el Tribunal
Constitucional de España, cuando estableció que la interpretación de la legalidad ordinaria no
puede ser analizada por la jurisdicción constitucional, salvo que la misma se funde en una
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 671
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

interpretación arbitraria o manifiestamente irrazonable, cuando esa interpretación carezca de la


debida motivación o cuando se apoye en una causa legal inexistente (STC 133/2000, de 16 de
mayo, SSTC 214/1988 de 14 de noviembre, 63/1992 de 29 de abril, SSTC 69/1984 de 11 de
junio; y, 57/1988 de 5 de abril).

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso analizado, los accionantes señalan que dentro del proceso ordinario de nulidad de
documentos iniciado por Jorge Federico Céspedes Toro en su contra, éste, mediante su
apoderado legal, posterior a la respuesta negativa a la demanda y a la reconvención de la acción
presentadas por su parte, solicitó la aplicación de medidas precautorias consistentes en que se
ordene al demandado Oscar Rea Condarco que se abstenga de realizar actos de disposición y/o
representación sobre las cuatro mil seiscientas ochenta y seis acciones de su propiedad y al
mismo tiempo, para evitar que esas acciones pierdan su representación al interior de la sociedad,
conceda a favor del mandatario, la representación legal ante la sociedad y ante terceros de las
citadas acciones, debiendo notificarse con dicha disposición a la codemandada, ahora
coaccionante, Elizabeth Jannone de Saucedo. Petición que, mediante Auto de 24 de mayo de
2010, se le concedió de manera parcial, sólo en cuanto a la abstención solicitada, rechazando la
representación legal pretendida; Resolución de la que, el demandante pidió complementación en
cuanto a la representación legal provisional, rechazada por el Juez de la causa mediante decreto
de 5 de junio de 2010.

Contra el Auto de 24 de mayo, ambas partes del proceso, presentaron recurso de reposición bajo
alternativa de apelación; de un lado, Jorge Federico Céspedes al no haberse atendido
favorablemente su pedido de otorgación de representación legal provisional de las acciones; y de
otro, Oscar Rea Condarco y Elizabeth Jannone de Saucedo, solicitando que se deje sin efecto la
medida impuesta con relación a que debe abstenerse de realizar ningún acto de disposición de
las acciones. Recursos resueltos en primera instancia mediante Resolución 250/2010; por la que,
el Juez Noveno de Partido en lo Civil y Comercial, declaró haber lugar parcialmente a la
reposición interpuesta por la parte demandante, dejando sin efecto legal la providencia de 5 de
junio de 2010 y complementando el Auto de 24 de mayo del citado año, determinando restringir
y limitar los derechos reconocidos por el art. 268 del Ccom, con respecto a Oscar Rea Condarco,
en su condición de accionista de la empresa inmobiliaria “Casa de Campo” S.A., no pudiendo el
mismo, dentro de ella, efectuar ningún acto que conlleve a modificar, cambiar, sustituir, gravar y
efectuar actos de disposición u otro semejante con respecto a las cuatro mil seiscientos ochenta y
seis acciones dentro de la referida Sociedad; declarando no ha lugar al recurso de reposición
formulado por los demandados, concediéndose en consecuencia, los recursos de apelación
planteados alternativamente.

Una vez remitidas las apelaciones interpuestas, ambas recayeron en la Sala Civil Segunda,
conformada por las autoridades jurisdiccionales ahora demandadas, instancia que resolvió los
recursos por Resolución I-371/11, mediante la cual, confirmaron el Auto de 24 de mayo de
2010, así como la Resolución 250/2010, “…complementando a su vez, en sentido de que se
otorga provisionalmente la representación legal de las 4686 acciones de la Empresa
Inmobiliaria Casa de Campo S.A., registradas actualmente a nombre de Oscar Rea
Condarco, a favor de Javier Camacho Pinto representante de Jorge Federico Céspedes
Toro, no pudiendo éstos últimos ejercitar acto alguno de disposición sobre las acciones
señaladas…”(sic), fallo del cual, los demandados solicitaron explicación y complementación,
rechazado mediante decreto de 12 de julio de 2011.

En ese orden, denuncian que tanto la Resolución I-371/11 como el Auto de 12 de agosto de
2011, que complementaron el fallo venido en apelación, otorgando adicionalmente la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 672
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

representación legal provisional al abogado apoderado del demandante, constituirían actos


vulneratorios de sus derechos fundamentales y garantías constitucionales alegados, porque a su
criterio, dicha medida precautoria rompería con el principio de igualdad, porque inhiben a Oscar
Rea Condarco de la representación legal de las acciones de la empresa inmobiliaria “Casa de
Campo” S.A., asignando la misma, por derecho propio, a un tercero que no es parte del proceso
sin que concluya el juicio de nulidad en todas sus etapas procesales y exista cosa juzgada,
provocando que una medida que debía ser producto de una sentencia ejecutoriada sea adoptada
al comienzo del proceso, sin considerar además que el monto cancelado hasta el momento por
las acciones, consolida el derecho propietario a favor del comprador de acuerdo a la adenda de
31 de julio de 2007; confiriendo al apoderado del demandante una representación que ni el
mismo actor le encomendó en su poder 22/2010, instrumento en el que no se le otorgó facultad
para solicitar una medida precautoria de esa naturaleza porque se trata de un simple apoderado
procesal, convirtiendo dicha medida en una confiscación o una expropiación del derecho de
titularidad sobre las citadas acciones. Solicitando que en virtud a lo señalado, mediante el
presente amparo constitucional se anulen ambas resoluciones y se disponga la emisión de un
nuevo pronunciamiento, conforme a los razonamientos de la sentencia constitucional de
concesión a emitirse, lo que sin duda, involucra la revisión de la interpretación que, dentro del
proceso civil de nulidad de contrato, realizaron las autoridades jurisdiccionales demandadas
cuando conformaron el Tribunal de alzada.

Sin embargo de lo señalado, de la revisión del memorial de la presente acción, se constata que,
si bien los accionantes efectuaron una relación extensa y detallada de los hechos así como
especificaron varios derechos lesionados, no obstante ello, no explicaron de qué manera la labor
interpretativa impugnada resulta arbitraria, incongruente, absurda, ilógica o con error evidente,
identificando en forma clara y precisa si los demandados omitieron cumplir con las reglas de
interpretación admitidas por el derecho y en qué forma esa interpretación y aplicación lesionó
sus derechos y garantías, motivos por los que, no es posible ingresar a la dilucidación de la
problemática de fondo, habida cuenta que, conforme a la línea jurisprudencial antes anotada, los
accionantes no deben limitarse a realizar una mera relación de hechos y actuados procesales e
invocar los derechos que estiman vulnerados, sino que adicionalmente, deben explicar la razón
por la que consideran que la interpretación y aplicación de una norma no es razonable, y además
explicitar de qué manera esa labor vulneró cada uno de los derechos y garantías señalados,
remarcando el nexo de causalidad entre aquella y estos, lo que no ocurrió en la especie.
Por lo tanto, el hecho de que la interpretación a tiempo de la aplicación de una determinada
normativa no hubiere sido favorable a las pretensiones de los demandados, ahora accionantes, no
puede ni debe servir de fundamento para que se impugne a través de la presente acción, la
determinación adoptada por las autoridades demandadas y menos, que se pretenda que este
Tribunal ingrese a valorar si dicha interpretación se sujetó al sistema de valores y principios que
sustentan la Constitución Política del Estado; por lo mismo, ante la inexistencia de los
presupuestos para que la jurisdicción constitucional, a través de la presente acción, ingrese a
revisar si las autoridades jurisdiccionales aplicaron en forma correcta o incorrecta la normativa
legal vigente, el amparo constitucional interpuesto debe ser denegado, en aplicación de la
jurisprudencia constitucional glosada en los Fundamentos Jurídicos precedentes, al no constituir
la presente, una vía adicional de impugnación ordinaria.

III.5. Consideraciones finales

Al margen de lo señalado, es necesario resolver otros aspectos que accesoriamente, los


accionantes demandaron mediante la presente acción como son, la acumulación de los recursos
de apelación interpuestos por las partes del proceso con posterioridad a su sorteo en el Tribunal
de alzada y la presentación extemporánea por parte del demandante de la complementación de 2

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 673


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de junio de 2010, resuelta por los ahora demandados, convalidando un plazo vencido, lo que a
su decir, acarrearía la nulidad de todos los actuados posteriores del proceso civil.

Con relación a ello, en primer término se debe dejar claramente establecido que la acumulación
de causas con posterioridad o con anterioridad a su sorteo, no constituye lesión alguna a ningún
derecho, al contrario, tiene la finalidad de evitar duplicidad de fallos o contradicciones en los
mismos, en todo caso, el aspecto que indudablemente debe estar garantizado tanto por las
autoridades jurisdiccionales como administrativas, es el juez independiente como elemento del
juez natural y a su vez del debido proceso, derecho y garantía que se efectivizará a tiempo de
realizar el sorteo de la causa a la instancia, juzgado o sala que corresponda; dado que la
radicatoria de una demanda o impugnación debe merecer necesariamente un sorteo previo, lo
que en el presente caso se cumplió, y el hecho de que posterior a dicho sorteo se acumulen dos
impugnaciones dentro de un mismo proceso, no es causal de nulidad, de ninguna manera.

Respecto al segundo aspecto demandado, es necesario establecer que la acción de amparo


constitucional se encuentra regida, entre otros, por el principio de inmediatez, o plazo de
caducidad, toda vez que, conforme a lo dispuesto por el art. 129.II de la CPE y la jurisprudencia
constitucional, dicha demanda debe ser presentada dentro de los seis meses, computables a partir
de la comisión de la vulneración alegada o de notificada la última decisión administrativa o
judicial; plazo que fue instituido a objeto que el impetrante de tutela que considere que sus
derechos o garantías se hallan lesionados, solicite la protección en forma pronta, oportuna y sin
dilaciones innecesarias, una vez agotadas las vías legales ordinarias, evitando una interposición
extemporánea de la acción, que no condice con su naturaleza y finalidad, de brindar una
protección inmediata, eficaz e idónea, frente a actos u omisiones ilegales o indebidos.

En ese orden, la supuesta lesión denunciada sobre la presentación extemporánea de una solicitud
de complementación, más allá de las veinticuatro horas que otorga de manera taxativa el art. 196
inc. 2) del CPC, no puede ser considerado mediante la presente acción, porque el memorial de 2
de junio de 2010, recibido en el Juzgado a cargo del proceso el 4 del mismo mes y año citados,
data de hace 1 año, 7 meses y 9 días anteriores a la interposición de la presente acción tutelar, en
tal razón, dicha denuncia se encuentra fuera del plazo de los seis meses establecidos para el
efecto.

En consecuencia, corresponde igualmente denegar la presente acción también con relación a


estos dos aspectos demandados.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley 027
del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: APROBAR la Resolución 08/2012 de 30 de
enero, cursante de fs. 546 a 552, pronunciada por la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 674


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0109/2012


Sucre, 27 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de libertad
Expediente: 00074-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 02/2012 de 31 de enero, cursante de fs. 53 a 54, pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Pablo Sorioco Surubí contra Humberto Téllez
Alurralde, Juez de Instrucción Mixto y cautelar de San Matias en suplencia legal de su
similar de San Ignacio de Velazco ambos del departamento de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante, por escrito presentado el 30 de enero de 2012, cursante de fs. 45 a 46 vta.,


manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 19 de enero de 2012, se hizo presente en las oficinas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el
Crimen (FELCC), a efecto de cumplir con la declaración informativa que iba a prestar a
solicitud de la Fiscal de Materia Amparo Canaviri Tapia, dentro de la denuncia presentada en su
contra por Celso Antonio Mejía Justiniano, por la supuesta comisión del delito de abigeato.

Una vez llevada a cabo la audiencia en la que prestó su declaración informativa y respondiendo
a todas las preguntas, grande fue su sorpresa cuando al concluir el acto la Fiscal no le permitió
salir, ya que su situación jurídica debía decidirla el juez cautelar. En ese entendido, fue
aprehendido y puesto a disposición del juez cautelar de turno, para que dentro de las veinticuatro
horas que establece el Código de Procedimiento Penal, la Fiscal presente imputación formal y dé
lugar al señalamiento de audiencia de medidas cautelares; sin embargo, una vez aprehendido y
conducido a la celda policial, debido a su avanzada edad -72 años-, y el pernoctar en las celdas,
produjo que se descompusiera su estado de salud, llegando al punto que su presión arterial se
alteró y casi perdió la vida. Por tal motivo, fue trasladado a un centro médico, donde el médico
forense le diagnosticó deshidratación moderada e hipertensión arterial, recomendando
internación inmediata.

No obstante lo sucedido, la audiencia de medidas cautelares no fue llevada a cabo hasta la fecha
de presentación de la presente acción es decir, que transcurrieron más de cinco días
consecutivos, que constituyen más de ciento veinte horas prolongadas de su detención ilegal,
toda vez que no existe ninguna orden emitida por autoridad competente que haya dispuesto su
detención y aprovechando su situación de detenido, pretenden incriminarlo en la comisión de un
delito en el que no participó, pues si bien en su declaración manifestó haber sacado tres cabezas
de ganado, pero estas fueron obtenidas de un potrero común y no del hernista del denunciante,
quien no sabe dónde se encuentra su ganado; es más, los últimos días, le solicitaron entregue las
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 675
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cabezas de ganado, pese a no tenerlas, y corra con los gastos de honorarios de la abogada del
denunciante, en la suma de $us300.- (trescientos dólares estadounidenses) y Bs1000.- (mil
bolivianos) por concepto de daños y perjuicios.

En ese contexto, la Juez de Instrucción cautelar de Cotoca, en suplencia legal del de San Ignacio
de Velazco, señaló audiencia de medidas cautelares para el 21 de enero del presente año, que fue
suspendida debido su estado de salud, motivo por lo que argumentó se mantuvo sin resolución
su acción extraordinaria invocada.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Se señaló como vulnerado su derecho a la libertad, citando al efecto los arts. 109, 110, 115, 116
y 119 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitud que de manera inmediata se libre mandamiento de libertad a su favor, y cese la


custodia a la que se encuentra sometida en el centro de salud donde se halla hospitalizado.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 31 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 51
a 52 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la demanda

El abogado accionante, ratificó íntegramente los términos de la acción tutelar presentada.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Humberto Téllez Alurralde, Juez de Instrucción Mixto y cautelar de San Matias en suplencia
legal de su similar de San Ignacio de Velazco, no presentó informe escrito ni se hizo presente en
audiencia, pese a su legal citación por lo que se continuó en su rebeldía.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez de Partido y de Sentencia de San Ignacio de Velazco del


Departamento de Santa Cruz, mediante Resolución 02/2012 de 31 de enero, cursante de fs. 53
a 54, concedió la tutela de la acción de libertad, con el fundamento que de acuerdo al art. 15
de la CPE, es prioridad proteger el derecho fundamental a la vida de las personas, aplicando
la inmediatez en la tramitación de la presente acción tal cual manifiesta el art. 126 de la
Norma Fundamental.

II. CONCLUSIONES

Efectuada la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. A fs. 11, cursa formulario de denuncias de 20 de diciembre de 2011, mediante el cual se
denunció al accionante por la supuesta comisión del delito de abigeato, dándose inicio a la
investigación, el 20 del citado mes y año, de acuerdo al informe de inicio de investigación de la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 676


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

misma fecha (fs. 13), dirigido por la Fiscal ante el Juez Mixto de Instrucción de San Ignacio de
Velasco.

II.2. De fs. 29 a 32, cursa la declaración informativa de 19 de enero de 2012, prestada por el
accionante, que una vez realizada, mediante requerimiento fiscal de la misma fecha, se dispuso
su aprehensión y se puso a conocimiento del Juez cautelar de turno, a objeto de resolver su
situación jurídica dentro de las veinticuatro horas.

II.3. De fs. 34 a 36, cursa el memorial de 20 de enero de 2012, presentado por los hijos del
accionante, para que mediante requerimiento fiscal, se disponga el traslado del imputado a un
centro médico asistencial debido a su delicado estado de salud, que por requerimiento de la
misma fecha fue atendido su pedido.

II.4. A fs. 37, cursa certificado médico forense de 20 de enero de 2012, que acredito la
internación hospitalaria debido al delicado estado de salud del accionante.

II.5. De fs. 39 a 40 vta., cursa la imputación de 20 de enero de 2012, formulada contra el


accionante, por la supuesta comisión del delito de abigeato, solicitando la medida cautelar de
detención preventiva.

II.6. De fs. 4 a 6, cursa una primera acción de libertad de 24 de enero de 2012, el Auto de
Admisión y señalamiento de audiencia para el 25 de ese mes y año; asimismo, ante esa acción,
la Fiscal demandada presentó su informe de 25 del mismo mes y año (fs.10).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante manifestó que la autoridad demandada lesionó su derecho a la libertad, puesto


que: uno) Luego de prestar su declaración informativa de forma voluntaria, fue aprehendido y
conducido a celdas de la Policía Boliviana, donde se indispuso gravemente y tuvo que ser
internado en un centro médico; dos) Pese a disponer su aprehensión para que sea el Juez de
Instrucción cautelar quien defina su situación jurídica dentro de las veinticuatro horas siguientes
a su aprehensión, ésta se prolongó por más de cinco días sin que exista ninguna orden de
autoridad competente que disponga su detención. Correspondiendo analizar en revisión, si tales
argumentos son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos al derecho a la libertad del
accionante, a fin de otorgar o denegar la tutela solicitada.

III.1.Naturaleza jurídica y ámbito de protección de la acción de libertad

De acuerdo a la jurisprudencia constitucional, establecida en las SSCC 0040/2011-R,


0100/2011-R, entre otras se manifestó que: “La garantía jurisdiccional del habeas corpus fue
consagrada por el art. 18 de la Constitución Política del Estado (CPEabrg), actualmente, la
Constitución Política del Estado vigente a sus arts. 125 al 127 también la contempla pero con la
denominación de acción de libertad; sin embargo, no se trata de un simple cambio de
nomenclatura, sino de una precisión conceptual, pues conforme a la teoría del Derecho
Procesal Constitucional, sustituir la denominación de 'recurso', por la de 'acción' -además de
adecuar la legislación boliviana a la evolución de la doctrina de la materia- implica reconocer
a esta garantía como 'la facultad de demandar la protección de un derecho ante los órganos
jurisdiccionales' o sea 'poner en marcha el aparato del Estado para la protección de un derecho
conculcado', en contraposición a la denominación de 'recurso' que implicaba considerarla como
la simple impugnación o reclamación que, concedida por ley, efectúa quien se considera
perjudicado o agraviado por la providencia de un juez o tribunal para que el superior la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 677


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

reforme o revoque y que por ello supone la existencia previa de un litigio (García Belaunde,
Domingo. 'El hábeas corpus en el Perú'. Universidad Mayor de San Marcos, 1979, p. 108).

La precisión conceptual que implica el cambio de denominación, también conlleva que,


englobando el ámbito de protección y las características esenciales del hábeas corpus, la
acción de libertad adquiera una nueva dimensión; en ese sentido, se constituye en una garantía
jurisdiccional esencial, pues su ámbito de protección ahora incorpora al derecho a la vida -
bien jurídico primario y fuente de los demás derechos del ser humano- junto a la clásica
protección al derecho a la libertad física o personal, la garantía del debido proceso en los
supuestos en que exista vinculación directa con el derecho a la libertad física y absoluto estado
de indefensión (SC 1865/2004-R de 1 de diciembre) y el derecho a la libertad de locomoción,
cuando exista vinculación de este derecho con la libertad física o personal, el derecho a la vida
o a la salud (SC 0023/2010-R de 13 de abril).

Asimismo, la Constitución vigente mantiene las características esenciales del hábeas corpus: El
informalismo, por la ausencia de requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por la
urgencia en la protección de los derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite
caracterizado por su celeridad; la generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio,
inmunidad o prerrogativa, y la inmediación, porque se requiere que la autoridad judicial tenga
contacto con la persona privada de libertad.

Es importante resaltar que la Constitución Política del Estado vigente, en el marco más amplio
que implica la concepción de “acción de libertad” y acorde al principio de progresividad,
acentúa algunas de las características anotadas; así por ejemplo, en el caso del informalismo,
contempla la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, antes reservada sólo a
los supuestos en que la persona fuera menor de edad, incapacitada, analfabeta o notoriamente
pobre; en el caso de la inmediación, además de establecer que la autoridad judicial dispondrá
que el accionante sea conducido a su presencia, prevé la posibilidad de que ésta acuda al lugar
de detención; asimismo, como ya se ha referido, amplía el ámbito de protección, pues la ahora
acción de libertad no se limita a la protección de ese derecho, sino que alcanza al derecho a la
vida, además de la posibilidad de presentarla también contra particulares (art. 126 CPE).

De este modo, la jurisprudencia desarrollada por este Tribunal para el hábeas corpus, en tanto
y en cuanto no se contraponga a la Constitución Política del Estado es plenamente aplicable a
la acción de libertad…” (las negrillas son nuestras).

III.2. De la identidad de objeto, sujeto y causa en acción de libertad

Respecto a dicho contexto jurídico, la SC 1023/2011-R de 22 de junio, expresó que: “La


finalidad de la acción de libertad, es principalmente la protección de los derechos a la libertad
y a la vida, en virtud a ello, el procedimiento constitucional relativo a su trámite, es solemne y
sumario, al ser considerada la acción de defensa que tutela y protege dichos derechos y
garantías fundamentales, de tal manera que su uso debe ser mesurado, evitando activarla de
forma reiterada, más aún si se trata de los mismos accionantes, contra las mismas autoridades
demandadas y con iguales fundamentos; en ese sentido la jurisprudencia constitucional,
estableció como causal de improcedencia la identidad de objeto, causa y personas, así la SC
1161/2005-R determinó que: '…este Tribunal, en innumerables fallos entendió que el recurso 26
de septiembre, de hábeas corpus es improcedente cuando el recurrente interpone dos recursos
contra las mismas autoridades recurridas y con los mismos fundamentos, haciendo un uso
abusivo de este recurso constitucional, lo cual impide al Tribunal Constitucional
pronunciarse sobre el fondo de uno de los recursos, pues incurriría en duplicidad de fallos
respecto a un mismo asunto.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 678
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

(…) De la doctrina constitucional glosada, se concluye que cuando este Tribunal conoce en
revisión una acción tutelar y evidencia que el recurrente acudió en una segunda oportunidad
a la jurisdicción constitucional, a través del recurso de hábeas corpus, estableciéndose con tal
actuación la existencia de identidad absoluta de sujetos (partes: recurrente y recurrido),
objeto (pretensiones del actor) y causa (hechos o supuestos fácticos en que se fundó la
demanda), o que el actor hubiese incoado antes la misma acción, con idéntico propósito y por
iguales motivos, aunque contra distintas autoridades, -en este último supuesto constatándose
sólo la identidad parcial de los sujetos procesales-, este Tribunal, en ambos supuestos, está
impedido de ingresar al fondo de uno de los recursos; entendimiento jurisprudencial que se
sustenta en el hecho de que el recurrente no puede pretender que este Tribunal que ya emitió
un pronunciamiento expreso sobre el mismo problema jurídico planteado -en ambos
recursos- vuelva a considerar el fondo de lo que ya ha sido demandado y resuelto, porque de
así hacerlo, incurriría en una innecesaria e irregular duplicidad de fallos respecto a un
mismo asunto; sólo por el uso abusivo y temerario de este recurso constitucional'" (las
negrillas fueron añadidas).

III.3. Sobre el caso analizado

Respecto al caso en análisis, el accionante presentó una anterior acción de libertad contra el
mismo Juez ahora demandado, así mismo a la Fiscal asignada al caso investigado también a un
efectivo policial, proceso que una vez resuelto, por el Juez de garantías, quien determinó
“conceder” la tutela sólo respecto al Juez demandado, y denegarla contra los otros dos
demandados.

No obstante dicha decisión, y bajo los mismos argumentos presentados en la acción de libertad
registrada bajo el número 00075-2012-01-AL el accionante, activó nuevamente la vía
constitucional presentando la acción ahora revisada, que contiene exactamente la misma
redacción que el memorial de la anterior acción de libertad, existiendo identidad de objeto sujeto
y causa, dado que en ambas solicitó cese la custodia a la que se encuentra sometido en el centro
de salud donde está hospitalizado, librándose el respectivo mandamiento de libertad, debido a
una orden de aprehensión emanada por la Fiscal asignada al caso que una vez puesto bajo el
control de la autoridad jurisdiccional demandada, este no llevó a cabo la audiencia de medidas
cautelares dentro de las veinticuatro horas, transcurriendo más de cinco días sin determinar su
situación jurídica; en ese contexto, se hace inviable ingresar al análisis de fondo de la presente
acción tutelar, pues se hizo un uso desmedido de dicha acción en busca del mismo fin bajo los
mismos argumentos esgrimidos en una anterior acción de libertad.

En conclusión, teniendo en cuenta los antecedentes del caso y la jurisprudencia aplicable al


mismo, no es posible ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada, toda vez que la
acción de libertad establecida en el art. 125 de la CPE. En esa lógica, considerando que el
expediente 0075-2012-01-AL, fue resuelto con anterioridad por un Tribunal de garantías y en
revisión por el Tribunal Constitucional Plurinacional TCP, quien emitió la SCP 0066/2012 de 12
de abril, al respecto consiguientemente debe ser resuelto analizando el fondo de la problemática
planteada y no así el presente, pues tal como se manifestó precedentemente, esta acción de
libertad fue presentada posteriormente a la citada líneas arriba, con identidad de objeto, sujeto y
causa.

En consecuencia, el Tribunal de garantías al haber concedido la acción tutelar, no obró


correctamente.

POR TANTO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 679


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada, en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art.
12.7 Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: REVOCAR la
Resolución 02/2012 de 31 de enero cursante de fs. 53 a 54, dictado por el Juez de Partido Mixto
y de Sentencia de San Ignacio de Velasco del Distrito Judicial de Santa Cruz; y, en
consecuencia, DENEGAR la tutelar solicitada sin ingresar al fondo de la problemática.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0110/2012


Sucre, 27 de abril de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00202-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 1 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 26 vta. a 28 vta.,


pronunciada dentro de la acción de libertad interpuesta por Otto Andrés Ritter Méndez en
representación de Carlos Antonio Escalier Chávez contra Erwin Jiménez Paredes, Juez
Cuarto de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 7 de febrero de 2012, cursante de fs. 19 a 20 vta., el accionante, por
su representado, expone los siguientes fundamentos de hecho y derecho:
I.1.1. Hechos que motivan la acción

Carlos Antonio Escalier Chávez se encuentra ilegalmente detenido a consecuencia de una


denuncia interpuesta en su contra por la supuesta comisión del delito de lesiones gravísimas;
motivo por el cual solicitó la cesación de la medida cautelar impuesta, petición que fue negada y
confirmada en apelación, motivando la interposición de una acción de libertad, que le resultó
desfavorable.

Por todo ello, interpuso nueva solicitud de cesación a la detención preventiva el 20 de enero de
2012, al Juez ahora demandado, quien no señaló oportunamente audiencia, por lo que el 2 de
febrero del mismo año, pidió se pronuncie al efecto; sin embargo, el expediente recién salió de
despacho el 6 de igual mes y año, oportunidad en la que constató con sorpresa, que el
verificativo de la audiencia recién sería para el 29 de ese mes y año, actitud con la cual el Juez
incurrió en actos de denegación de justicia pronta y oportuna con demoras y dilaciones
injustificadas, manteniéndose de esa manera su detención indebida.

I.1.2. Derecho, garantías y principios supuestamente vulnerados


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 680
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante estima lesionado el derecho a la libertad de su representado; así como las garantías
al debido proceso y a una justicia pronta y oportuna; y los principios constitucionales de
presunción de inocencia y de aplicación de la ley más favorable, citando al efecto los arts. 21.7,
22 y 23 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes, solicita se conceda tutela a favor de su representado y se ordene al Juez
demandado el señalamiento de audiencia de cesación de su detención preventiva, debiendo la
misma ser llevada a cabo dentro de los “siguientes cinco días” (sic).

I.2. Audiencia y resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 8 de febrero de 2012, con la única presencia de la parte


accionante, según consta en el acta cursante de fs. 25 a 26 vta., se produjeron los siguientes
actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante ratificó el tenor integro de la demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Erwin Jiménez Paredes, Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, no asistió a la audiencia, sin
embargo presentó informe escrito cursante a fs. 24 donde señala: a) La falta de señalamiento de
audiencia en forma oportuna obedece al hecho de que el cuaderno procesal se encontraba en
“Sala” para resolver el recurso de apelación interpuesto por el mismo imputado contra la
Resolución de medidas cautelares; b) Devuelto el cuaderno procesal el 26 de enero del año en
curso, fue radicado mediante providencia del día siguiente, ingresando a despacho en forma
inmediata, señalándose el 30 de ese mes y año audiencia para el 29 de febrero de 2012; c) Lo
anterior, a consecuencia de la recargada agenda procesal que tiene en su juzgado, que sumada a
los feriados de carnaval, imposibilitaron señalarla de manera antelada; y, d) El señalar de forma
inmediata la realización del actuado requerido iría contra los intereses de otros litigantes,
vulnerando el principio de igualdad de las partes.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, constituido en
Tribunal de garantías, mediante Resolución 1 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 26 vta. a
28 vta., concedió la tutela solicitada, disponiendo que la autoridad accionada señale audiencia
en un plazo menor al fijado, readecuando a tal efecto su agenda sin afectar los intereses de otros
procesados. La Resolución fue emitida con el fundamento que si bien, de acuerdo al art. 125 de
la CPE, en el caso de autos no se cumpliría con ninguno de los requisitos para demandar la
acción, por cuanto el accionante “no está ilegalmente perseguido, procesado o privado de su
libertad personal” (sic); sin embargo, estaría sujeto a control jurisdiccional relacionado con el
principio de celeridad procesal, pues de acuerdo a la jurisprudencia constitucional, la
celebración de la audiencia de cesación de la detención preventiva debe fijarse dentro de un
plazo razonable, situación que no sucedió en el presente caso, no por un actitud dolosa del Juez
ahora demandado, sino de forma involuntaria.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 681


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Carlos Antonio Escalier
Chávez, éste solicitó al Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal la cesación de su detención
preventiva, mediante memorial presentado el 20 de enero de 2012, pidiendo se señale día y hora
de audiencia (fs. 2 y vta.).

II.2. El Juez demandado por proveído de 30 de enero de 2012, señaló audiencia de cesación a la
detención preventiva del imputado, ahora accionante, para el miércoles 29 de febrero de 2012, a
horas 9:30 (fs. 3).

II.3. Por memorial presentado el 1 de febrero de 2012, el accionante reiteró su solicitud de


señalamiento de día y hora de audiencia, a lo que el Juez demandado dispuso se esté a la
providencia de 30 del mismo mes y año (fs. 4 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración del derecho a la libertad de su representado, así como las
garantías constitucionales al debido proceso, justicia pronta y oportuna, además de los principios
de presunción de inocencia y aplicación de la ley más favorable aduciendo que al encontrarse
detenido preventivamente dentro del proceso penal que se le sigue por el delito de lesiones
gravísimas, el 20 de enero de 2012 solicitó la cesación de la medida cautelar, a lo que el Juez
demandado señaló audiencia recién para el 29 de febrero de 2012; es decir, a más de un mes de
impetrada su solicitud, incurriendo con ello en denegación de justicia pronta y oportuna. En
consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes, a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza y alcances de la acción de libertad

De acuerdo al nuevo orden constitucional, el art. 125 de la CPE, ha previsto la acción de libertad
como una garantía constitucional de carácter jurisdiccional que tiene por finalidad la protección
a la libertad personal, frente a una persecución, detención, procesamiento o prisión ilegal o
indebida, ampliando su carácter protectivo al derecho a la vida cuando ésta se encuentra
vinculada con el derecho a la libertad. En este sentido, dicha norma constitucional ha previsto
que: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o
que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de
Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna
formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que
se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales
o se restituya su derecho a la libertad”.

La finalidad de la acción de libertad no es otra que proteger y restablecer el derecho a la libertad


física y resguardar el derecho a la vida cuando se encuentra en peligro, por cuya razón se
constituye en una acción tutelar preventiva, correctiva y reparadora.

III.2. De la celeridad en la tramitación de solicitudes de cesación a la detención preventiva

La Convención Americana sobre Derechos Humanos en el art. 8.1, determina que toda persona
tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable por un juez o
tribunal competente, independiente e imparcial. Asimismo, el art. 14.3.c del Pacto Internacional

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 682


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de Derechos Civiles y Políticos, consagra el derecho de toda persona acusada de un delito a ser
juzgada sin dilaciones indebidas.

En este entendido, se advierte que estos Tratados integrantes del bloque de constitucionalidad
(art. 410.II de la CPE), regulan dentro del debido proceso el derecho del imputado a ser juzgado
en un plazo razonable que no exceda límites temporales muy notorios que puedan ser
considerados injustificables; pues el juzgador tiene el “deber” de resolver los casos sometidos a
su consideración de manera diligente, mucho más cuando está de por medio la libertad de las
personas; por lo que el juez, aparte de considerar la seguridad personal del imputado y la
presunción de inocencia, debe tener presente que la libertad es la regla y la detención es la
excepción; de ahí la necesidad de atender con la debida prontitud el beneficio de cesación de la
detención preventiva en los procesos en los que el imputado se encuentra detenido.

En el Estado Plurinacional Boliviano, la Norma Fundamental consagra determinados derechos


estatuidos con la finalidad de limitar el poder del Estado, ya exigiendo una abstención o
asignando un deber de prestación. Dentro del derecho penal, la Constitución Política del Estado
ofrece un sistema de control ante los órganos jurisdiccionales, por tal motivo ha incorporado una
variedad de principios, encontrándose entre ellos el de la “celeridad”, que obliga a que el
imputado sea juzgado dentro de un plazo razonable.

En el nuevo y vigente orden constitucional, el art. 115 de la CPE, determina la protección


oportuna y efectiva de las partes por el órgano jurisdiccional en el ejercicio de sus derechos e
intereses legítimos, así como garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia
plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones; precepto constitucional que se
sustenta, conforme se anotó, en el principio de celeridad, previsto por el art. 180.I cuando
señala: “La jurisdicción ordinaria se fundamenta en los principios procesales de gratuidad,
publicidad, transparencia, oralidad, celeridad, probidad, honestidad, legalidad, eficacia,
eficiencia, accesibilidad, inmediatez, verdad material, debido proceso e igualdad de las partes
ante el juez”; en consecuencia, la celeridad, es entre otros requisitos, la exigencia esencial de la
administración de justicia y, es por ello, que la Ley del Órgano Judicial, en su art. 3.7. adopta
este principio el cual “comprende el ejercicio oportuno y sin dilaciones en la administración de
justicia”.

En materia procesal, el art. 133 del Código de Procedimiento Penal (CPP) señala que todo
proceso tendrá una duración máxima de tres años, contados desde el primer acto del
procedimiento, salvo el caso de rebeldía; determinando, por otro lado, en el art. 135 del mismo
Código, la responsabilidad disciplinaria por retardación de justicia, por lo que a fin de evitar
dicha dilación señala en la mayor parte de los casos y en forma expresa, los plazos en que debe
desarrollarse los diferentes actuados procesales, tales, por ejemplo, el de dictar las providencias
de mero trámite dentro de las veinticuatro horas de la presentación de los actos que las motivan,
de donde se advierte que en caso de no dictarse dentro de dicho plazo se incurre en una dilación
indebida, que puede provocar la restricción a la libertad personal.

En el entendido que el derecho a un proceso sin dilaciones indebidas constituye una garantía, el
Tribunal Constitucional Plurinacional considera que una demora injustificada e irrazonable en la
tramitación del proceso penal, implica el desconocimiento de la garantía del debido proceso y la
violación del principio de celeridad procesal, que puede dar lugar incluso, a la conclusión del
proceso cuando los jueces y tribunales de justicia no dirigen e impulsan su tramitación hacia su
conclusión dentro de un plazo razonable; toda vez que ellos tienen la obligación de dirigir el
proceso y concluir el mismo en tiempo oportuno y conforme a ley, pues obrar en forma tardía o
lenta en contra de las normas estatuidas no es administrar justicia; por lo que el impulso
procesal, entendido como la acción de llevar adelante el proceso hacia la sentencia definitiva, no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 683
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

es de responsabilidad exclusiva de las partes litigantes, sino principalmente de los propios


órganos jurisdiccionales, cuyo incumplimiento da lugar a la retardación de justicia, lo cual
amerita se adopten las medidas necesarias encaminadas a evitar la paralización del proceso o su
dilación indebida a través de la ejecución de actuados procesales en plazos demasiados
prolongados, cuando, por ejemplo, no están expresamente normados en nuestra economía
procesal, tal como ocurre en los señalamientos de audiencias para considerar el beneficio de la
cesación de la detención preventiva.

III.3. Audiencia para considerar el beneficio de cesación de la detención preventiva

El art. 178.I de la CPE., señala que la potestad de impartir justicia emana del pueblo boliviano y
se sustenta, entre otros, en el principio de celeridad; por lo que, ante la ausencia de una
disposición legal que fije un plazo en el que debe realizarse la audiencia de cesación de la
detención preventiva, se debe aplicar los arts. 22, 23.I y 180.I de la CPE, relativas a la libertad y
celeridad.

Si bien las SSCC 1115/2011-R, 1130/2011-R, 1150/2011-R y 1179/2011-R, entre otras,


coinciden en señalar que las autoridades que conozcan las solicitudes de cesación de la
detención preventiva, tienen la obligación de tramitarlas con la mayor celeridad posible, o
cuando menos dentro de plazos razonables, mas su aplicabilidad en la praxis no ha sido objeto
de cumplimiento de parte de los juzgadores, lo cual amerita que la frase “plazo razonable”,
tratándose de señalamientos de día y hora de audiencia para considerar este beneficio, debe ser
conceptuada como un término brevísimo, de tres días hábiles como máximo, pues el imputado
se encuentra privado de su libertad. En este entendido, el plazo razonable para la realización
de la audiencia de análisis, consideración y resolución del beneficio de la cesación de la
detención preventiva, será el término máximo antes señalado, incluidas las notificaciones
pertinentes, lo contrario constituye vulneración del derecho a la libertad, en el entendido en que
los jueces no pueden obrar contra los derechos fundamentales de las personas privadas de
libertad (art. 73 y ss de la CPE), bajo el argumento de existencia de “sobrecarga procesal” para
justificar una negligencia e incumplimiento de un deber de servicio a la sociedad.

Por otra parte, ante la inexistencia de un plazo específico determinado por ley para que el juez
señale día y hora de audiencia para considerar la cesación de la detención preventiva, es
necesario establecer que el memorial de solicitud, debe ser providenciado
indefectiblemente dentro de las veinticuatro horas de su presentación, conforme dispone el
art. 132 inc. 1) del CPP, al tratarse de una providencia de mero trámite. En este entendido, habrá
lesión del derecho a la libertad cuando existe demora o dilación indebida al no emitirse el
decreto pertinente de señalamiento de este actuado procesal dentro del referido plazo, bajo
sanción disciplinaria a imponerse al juzgador en caso de incumplimiento.

Lo anterior, constituye una modulación de la sub regla establecida en el inc. b) del Fundamento
Jurídico III.3 de la SC 0078/2010-R de 3 de mayo, en cuanto al plazo para fijar audiencia, el que
queda determinado en según lo señalado supra; vale decir, tres días hábiles.

Cabe señalar además, que el Estado Plurinacional de Bolivia, al tenor del art. 1 de la CPE, se
funda en la pluralidad y el pluralismo político, económico, jurídico, lingüístico y ante todo
cultural, respetando y reafirmando los valores ético-morales de nuestra cultura ancestral, tal
como el “ama qhilla”, palabra quechua que traducida al español significa “no seas flojo” y, es
por ello que nuestra Norma Fundamental en su art. 8, la constitucionaliza como principio, al
igual que el “Ama llulla” (no seas mentiroso) y “Ama Suwa” (no seas ladrón), con la
intencionalidad de que la población encuentre en el trabajo y en el cumplimiento del deber una
grata y satisfactoria labor, tal como lo conceptuaron nuestros antepasados y las actuales culturas
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 684
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que sancionan con severas medidas su infracción, en tanto que nuestra Ley del Órgano Judicial,
en su art. 128, determina que el juez es pasible de enjuiciamiento disciplinario por incurrir en
demora culpable cuando éste dicta resoluciones en los procesos fuera de los plazos fijados por la
ley, tal como acontece en el caso presente, más aún cuando la solicitud corriente a fs. 2, está
vinculada al restablecimiento de un derecho fundamental cual es la libertad del detenido.

En consecuencia los operadores de justicia tienen la obligación de respetar y cumplir con la


precitada norma constitucional y, solo bajo ésta línea jurisprudencial ya establecida en la SC
0015/2012-R de 16 de marzo de 2012, los jueces y tribunales deben dirigir y resolver los casos
sometidos a su conocimiento dentro de los plazos previstos por ley y, para el caso de no estar
normados, desarrollar los actuados procesales dentro de un término razonable, por cuanto sus
dilaciones indebidas y retardaciones injustificadas, atentaran los derechos fundamentales de las
partes que van exigiendo mayor celeridad en la tramitación de sus causas.

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso presente se advierte que la autoridad accionada incurrió en incumplimiento de normas


procesales en materia penal y consiguiente dilación indebida y lesión al derecho a la libertad,
conforme denotan los siguientes actuados procesales.

Habiéndose presentado el memorial de solicitud de cesación de su detención preventiva el 20 de


enero 2012, el Juez no providenció dicho memorial dentro del término señalado por el art. 132
del CPP, (veinticuatro horas), sino que lo hizo luego de diez días de la recepción del mismo; es
decir, el 30 de enero del mismo año, actitud que implica incumplimiento de deberes, así como
denota una dilación en el proceso innecesaria, injustificada e ilegal, lesionando y poniendo en
riesgo el derecho a la libertad del detenido.

Por lo señalado precedentemente, la exigencia de señalar audiencia dentro del plazo de tres
días, se hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad personal, toda vez que
tales peticiones deben ser atendidas y resueltas de forma inmediata, puesto que si bien no existe
una norma que establezca un plazo, se ha establecido que éste debe ser “razonable”, no obstante
a ello, éste no es cumplido por los operadores de justicia, dilatando indebidamente la tramitación
de la solicitudes a la cesación de la detención preventiva, lesionado con ello el derecho a la
libertad personal del detenido.

Por lo precedentemente señalado, se concluye que el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal,


ahora demandado, al no haber providenciado en tiempo oportuno el memorial de solicitud de
cesación de su detención preventiva y señalado la audiencia en un plazo razonable, no ha
cumplido lo preceptuado por nuestra economía procesal penal ni ha efectuado una adecuada
compulsa de los antecedentes y de las normas aplicables al caso, incumpliendo de ese modo su
“deber”.

Consiguientemente, el Tribunal de garantías, al haber concedido la tutela solicitada, ha obrado


correctamente y conforme a derecho, por lo que corresponde confirmar la resolución 1 de 8 de
febrero del año en curso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 685


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

1º APROBAR la Resolución 1 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 26 vta. a 28 vta.,


pronunciada por la Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz; y
en consecuencia,

2º CONCEDER la tutela solicitada, en los términos expuestos.

3º Dado que la actitud negligente del Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal demandado, es
reiterativa en cuanto a los actos denunciados como ilegales, puesto que por los mismos motivos
ya fue demandado anteriormente en el caso correspondiente al expediente 00039-2012-01-AL,
se le llama nuevamente la atención, advirtiéndosele que de reiterarse una vez más su inadecuado
proceder, se remitirán antecedentes al Concejo de la Magistratura, para su consideración y
tratamiento respectivo.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani .-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0111/2012


Sucre, 27 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00139-2012-01-AL
Departamento: Tarija

En revisión la Resolución 01/2012 de 18 de febrero, cursante de fs. 149 vta. a 155, pronunciada
dentro de la acción de libertad interpuesta por Ramiro Ordóñez Reyes contra María Candelaria
Peñarrieta Vargas, Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de
Justicia de Tarija.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial de 17 de febrero de 2012 corriente de fs. 3 a 4 vta., el accionante presentó


acción de libertad, con los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido en su contra, por la presunta comisión del delito de homicidio en
grado de tentativa, la ahora autoridad demandada dispuso su detención preventiva el 23 de enero de
2012; a cuya consecuencia el 13 de febrero del mismo año, solicitó la cesación a su detención
preventiva, audiencia que fue señalada para el día 17 del referido mes y año.

Sin embargo, agrega el accionante, que dicha audiencia fue suspendida para el 22 de febrero de ese
año, por la autoridad demandada, puesto que no se contaba con el acta de audiencia cautelar de 23 de
enero, en la que se dispuso su detención preventiva, extremo que conforme lo señala el accionante,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 686
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

causa una detención indebida, ya que la cesación a su detención preventiva debió haberse tramitado
de forma inmediata.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante, sin citar norma legal alguna, denuncia la vulneración de su derecho a la libertad.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente”, y se restablezca inmediatamente su libertad, además se


determine la reparación del daño ocasionado.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 18 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante de


fs. 147 a 149 vta., produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante asistió a la audiencia acompañado de su abogado, quien haciendo uso de la


palabra, indicó que la suspensión de la audiencia de cesación a la detención preventiva de su
defendido, por no tener el acta de audiencia de aplicación de medidas cautelares, constituye
vulneración al debido proceso en relación con el derecho a la libertad, ya que constituye un acto
dilatorio.

Señala que el 23 de enero de 2012, se llevó a cabo la audiencia de aplicación de medidas


cautelares, en la que se dispuso la detención preventiva del accionante, fecha desde la cual, la
defensa solicitó el respectivo acta de audiencia, pero el funcionario del juzgado, hasta el 17 de
febrero de ese año no elaboró la misma.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Mediante informe de 18 de febrero de 2012, María Candelaria Peñarrieta Vargas, Juez Tercera
de Instrucción en lo Penal, señaló que no existe demora en la solicitud de tramitación de la
cesación a la detención preventiva del accionante, toda vez que la misma fue solicitada el 13 del
citado mes y año y la audiencia se señaló para cuatro días después, lo que es un plazo razonable
conforme lo determina la SC 0078/2010-R de 3 de mayo.

Indicó también que, la audiencia del 17 de febrero, fue suspendida por razones no imputables a
la demandada, toda vez que el funcionario encargado de faccionar el acta de audiencia de
medidas cautelares es del Secretario que se encuentra en suplencia, José Delgado, quien informó
que debido a la sobrecarga laboral existente fue imposible elaborarla.

Asimismo, manifestó la importancia del acta de audiencia de medidas cautelares, para la


consideración de cesación a la detención preventiva, puesto que necesariamente debían
considerarse los motivos que fundaron la detención preventiva del imputado.

En relación al funcionario encargado de la elaboración del acta, la autoridad demandada informó


que se asumieron las medidas disciplinarias contra éste, ante el Consejo de la Magistratura.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 687


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por otra parte, la jueza demandada hizo conocer la sobrecarga laboral que atraviesa el juzgado a
su cargo, afirmando que no cuenta con secretario desde el 7 de diciembre del 2011; y que
durante el mes de diciembre tampoco se contaba con auxiliar.

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Instrucción en lo Penal del Departamento de Tarija, constituido en Juez de


garantías, pronunció la Resolución 1/2012 de 7 de febrero, cursante de fs. 149 vta. a 155,
denegando la tutela. Conteniendo el fallo dictado, los siguientes argumentos: a) Ante la petición
del imputado de cesación a su detención preventiva, la autoridad judicial demandada, señaló
audiencia considerativa dentro de los tres días siguientes; la misma que fue suspendida para el
22 de febrero, debido a la inexistencia del acta de audiencia de aplicación de medidas cautelares,
siendo el mismo el siguiente día hábil, por lo que no se considera la existencia de dilación en el
proceso; b) Conforme lo establece los arts. 56 y 120 del Código Procesal Penal (CPP), la
redacción de actas corresponde al secretario, por lo que la autoridad judicial, mediante acta de
suspensión de la audiencia, procedió a conminar al funcionario de apoyo jurisdiccional a la
elaboración de la misma, así como también remitió antecedentes a conocimiento del Consejo de
la Magistratura; c) Debido a la importancia del acta de audiencia de medidas cautelares para la
realización del análisis ponderado de los elementos que determinaron la imposición de la
detención preventiva con los nuevos elementos de convicción que a criterio del imputado ya no
concurren, se considera justificado el motivo de la suspensión de la audiencia, d) El imputado
fue detenido preventivamente dentro de un proceso penal seguido en su contra por una autoridad
competente, por lo que mientras no exista una resolución en contrario, la detención no puede ser
considerada indebida, y; e) En audiencia, el accionante mostró su conformidad, no habiendo ni
siquiera hecho uso del recurso de reposición conforme lo establece la norma adjetiva y la SC
0080/2010-R de 3 de mayo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Mediante imputación formal de 22 de enero de 2012, la Fiscal de Materia, Mirtza Medina
Hoyos, atribuye la comisión del delito de homicidio en grado de tentativa, a Ramiro Ordóñez
Reyes (fs. 62 a 63).

II.2. Mediante decreto de 23 de enero de 2012, se señala audiencia de aplicación de medidas


cautelares para el mismo día (fs. 137 vta.).

II.3. Mediante memorial de 13 de febrero de 2012, el imputado Ramiro Ordóñez Reyes, solicita
la cesación a su detención preventiva (fs. 143 y vta.).

II.4. Mediante decreto de 14 de febrero de 2012, la Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal,


señala audiencia de cesación a la detención preventiva para 17 de ese mes y año. (Fs. 143 vta.)
II.5. A fs. 146 vta., cursa el acta de suspensión de audiencia de cesación a la detención
preventiva para el 22 de febrero, debido a la inexistencia del acta de audiencia de aplicación de
medidas cautelares llevada a cabo el 23 de enero de 2012.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante manifiesta estar indebidamente detenido, toda vez que su audiencia de cesación a
su detención preventiva señalada por la autoridad judicial demandada para el 17 de febrero de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 688
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

2012, fue suspendida para el 22 del mismo mes y año, debido a la inexistencia del acta de
audiencia de aplicación de medidas cautelares que se llevó a cabo el 23 de enero del mismo año.
Por lo que corresponde dilucidar en revisión si tal extremo es evidente, a fin de otorgar o no la
tutela solicitada.

III.1. De la naturaleza jurídica y ámbito de aplicación de la acción de libertad

La Constitución Política del Estado instituye la acción de libertad en su art. 125, que señala:
“Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que
es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad
y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad
procesal, ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde
tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se
restituya su derecho a la libertad”; norma constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP) que dispone: “Es una acción constitucional
extraordinaria de tramitación sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de
los derechos a la vida, a la libertad física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de estos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados”.

Por su naturaleza tutelar, la acción de libertad, tiene la finalidad de proteger de forma inmediata
y efectiva los derechos a la vida y la libertad física en los casos en los que sean ilegal o
indebidamente restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión por parte de las
autoridades públicas o particulares.

Constituye un mecanismo procesal idóneo para operar en caso de existir vulneración a la


celeridad cuando esté relacionada a la libertad y devenga de dilaciones indebidas, que retardan la
situación jurídica de una persona privada de libertad.

III.2. Del debido proceso

El debido proceso es una institución del derecho procesal constitucional que abarca los
presupuestos procesales mínimos a los que debe regirse todo proceso judicial o administrativo.

Doctrinalmente el debido proceso tiene dos perspectivas, concibiéndolo como un derecho en sí


reconocido a todo ser humano y como garantía jurisdiccional que tiene toda persona para ver
protegidos sus derechos en las instancias administrativas o jurisdiccionales. Esa doble naturaleza
de aplicación y ejercicio del debido proceso, es parte inherente de la actividad procesal, tanto
judicial como administrativa.

El procesamiento indebido se materializa cuando un juez o tribunal ya sea jurisdiccional o


administrativo, a tiempo de conocer un proceso, lesiona el derecho o garantía al debido proceso,
lo que implica, entre otros, el derecho a la defensa, al emplazamiento personal, a ser asistido por
un intérprete o traductor, a un juez imparcial, presunción de inocencia, a un proceso sin
dilaciones indebidas, etc.

III.3. El debido proceso y su vinculación con el derecho a la libertad

En la acción de libertad, podrá alegarse procesamiento ilegal indebido, cuando dicha lesión
afecte a alguno de sus elementos constitutivos y se encuentre directamente relacionada con la
amenaza, restricción o supresión de la libertad física o de locomoción del actor; toda vez que
otras formas de procesamiento indebido o ilegal que no encuentren vinculación directa con el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 689


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derecho a la libertad, deben compulsarse dentro del ámbito de la acción de amparo


constitucional.

Según lo previsto en el art. 14.3 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, el
derecho a la garantía judicial del debido proceso, en el ámbito penal, tiene como contenido un
conjunto de garantías mínimas como ser: el derecho a ser informado de la acusación, el derecho
a la defensa, el derecho a ser asistido por un intérprete, el derecho a un proceso público por un
juez natural, el derecho a un proceso sin dilaciones indebidas, el derecho a utilizar los medios de
prueba pertinentes para su defensa, derecho a no declarar contra sí mismo y a no confesarse
culpable. Entendiéndose un proceso sin dilaciones aquel que se desenvuelve en condiciones de
normalidad dentro del tiempo requerido y en el que los intereses litigiosos pueden recibir pronta
satisfacción.

Si bien no existe una norma que expresamente disponga el plazo máximo en el que deba
realizarse la audiencia de consideración de cesación a la detención preventiva, es acertado
aplicar los valores constitucionales declarados en el art. 180 de la CPE, que señala: “La
jurisdicción ordinaria se fundamenta en los principios procesales de gratuidad, publicidad,
transparencia, oralidad, celeridad, probidad, honestidad, legalidad, eficacia , eficiencia,
accesibilidad, inmediatez, verdad material, debido proceso e igualdad de las partes ante el juez”.

De lo que se puede establecer que la administración de la justicia, tiene como principio el debido
proceso; debiendo la autoridad judicial, atender todas las solicitudes de cesación a la detención
preventiva con la debida celeridad tomando en cuenta todos los elementos constitutivos del
debido proceso (como ser el derecho a un proceso sin dilaciones indebidas).

III.4. En el caso concreto

En el presente caso, el accionante afirma, que la autoridad judicial demandada suspendió la


audiencia de cesación a la detención preventiva, porque el acta de audiencia de medidas
cautelares no estaba labrada y era de vital importancia para llevar a cabo la misma. Si bien es
cierto que el acta era imprescindible para realizar la valoración de los presupuestos que dieron
lugar a la detención preventiva con los nuevos elementos que a criterio del imputado se han
modificado, la falta de recursos humanos dentro del despacho judicial, o la sobrecarga laboral,
para el cumplimiento de las obligaciones que establece la norma, no pueden ser perjudiciales a
las partes, y menos cuando esté en juego el derecho a la libertad.

Se tiene presente, que el responsable de la elaboración del acta de audiencia era el secretario que
fungía funciones en suplencia; sin embargo, no es menos cierto que la autoridad judicial
accionada es la responsable de todo el despacho, quien tiene la obligación de verificar que se
hayan cumplido con todas las actuaciones previas, a fin de evitar suspensión de las audiencias
por causas no establecidas en la ley y sean atribuibles a negligencias de los funcionarios
judiciales.

La Ley del Órgano Judicial, en su art. 30, establece como uno de los principios generales y
esenciales de éste Órgano, la celeridad, entendiéndose como la agilidad de los procesos
judiciales tramitados, procurando que su desarrollo garantice el ejercicio oportuno y rápido de la
administración de justicia. Por lo que, no se puede concebir que la sobrecarga laboral en los
despachos judiciales, sean causales validas para dejar de cumplir obligaciones que determina la
ley y que son imprescindibles para llevar a cabo la audiencia de cesación a la detención
preventiva, en la que se dilucidará la libertad del imputado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 690


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Al respecto, la jurisprudencia constitucional a través de la SC 0078/2010-R de 3 de mayo,


sostiene “… se considera acto dilatorio en el trámite de la cesación a la detención preventiva,
cuando: a) En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las
partes, se dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por ley (…) c) Se suspende la
audiencia de consideración, por causas o motivos que no justifican la suspensión, ni son
causales de nulidad. Tal el caso de la inasistencia del representante del Ministerio Público o de
la victima y/o querellante, si es que han sido notificadas legalmente y no comparecen a la
audiencia…” (el subrayado es nuestro).

En el asunto de examen, se establece que el hecho de suspender la audiencia de cesación a la


detención preventiva, por la negligencia de un funcionario judicial, constituye vulneración al
derecho a un proceso sin dilaciones indebidas, elemento constitutivo al debido proceso, que
restringe el derecho a la libertad del imputado, por lo que corresponde que dicha vulneración sea
tutelada a través de esta vía de acción de libertad.

Por lo que el Juez de garantías al denegar la acción tutelar, no ha obrado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia de conformidad con el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: REVOCAR la
Resolución 01/2012 de 18 de febrero cursante a fs. 149 vta. a 155, dictada por María Candelaria
Peñarrieta Vargas, Jueza Tercera de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de
Tarija, y en consecuencia CONCEDER la tutela solicitada, sin disponer la libertad de la accionante,
debiéndose estar a la resolución que se efectuó en la audiencia a la cesación a la detención preventiva,
que a la fecha ya debió haber sido celebrada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 691


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0112/2012


Sucre, 27 de abril de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00198-2012-01-AL
Departamento: Oruro

En revisión la Resolución 02/2012 de 24 de febrero, cursante de fs. 67 a 72, pronunciada dentro


de la acción de libertad, interpuesta por Roberto Hilasaca López contra Rosario Rodríguez
Sánchez, Jueza Primera de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante mediante memorial de 24 de febrero de 2012, cursante de fs. 44 a 45, manifestó


que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido en su contra por el presunto delito de transporte de sustancias
controladas, se encuentra detenido preventivamente en el Recinto Penitenciario de “San Pedro”
por orden del Juez Tercero de Instrucción en lo Penal desde hace más de cuatro meses y que una
vez realizada la audiencia conclusiva, el proceso fue remitido al Juzgado Primero de Sentencia
para la realización de juicio oral, oportunidad en la que pidió el 8 de diciembre de 2011,
cesación a su detención preventiva amparado en el art. 239.1 del Código de Procedimiento Penal
(CPP).

La audiencia para considerar su solicitud de 19 de diciembre de 2011, fue suspendida porque la


Jueza demandada no envió orden de salida al Gobernador del Penal de “San Pedro”, en cuya
ocasión programó audiencia para el 10 de enero de 2012, que no se llego a realizarse, esta vez
atribuible al escolta policial quien tardó en tramitar su salida de la cárcel lo que ocasionó llegue
demorado a la audiencia de cesación, motivo que dió lugar a que se vuelva a señalar audiencia
para el 27 de enero de 2012, de igual forma se suspendió fijando una nueva para el 31 del citado
mes y año a horas 17:30, que debió instalarse luego del juicio oral, sin embargo, no ocurrió
aquello, por ello no existe el acta correspondiente en el cuaderno procesal.

Ante esas irregularidades volvió a pedir audiencia de cesación a su detención preventiva el 1 de


febrero de 2012, que fue fijada recién para el 8 de febrero de ese mismo año a horas 17:30 y que
tampoco se llevó a cabo al haber sido suspendida por la Jueza demandada en forma ilegal,
aduciendo se realizaría a la conclusión del juicio oral, por lo que interpuso recurso de reposición,
que fue declarado improcedente. Indica que en esa oportunidad ni siquiera instaló la audiencia
de cesación, ni faccionó el acta, quebrantando sus derechos al debido proceso y a la libertad; y
luego al suspender sin motivo alguno la audiencia, desconoció las normas del Código de
Procedimiento Penal, que en ninguna parte refieren que las audiencias de cesación a la detención
preventiva pueden ser llevadas a cabo sólo al finalizar el juicio, sin tener en cuenta que este
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 692
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

petitorio, de cesación al estar vinculado a la libertad, sin importar el resultado del mismo, debe
ser atendido por el órgano jurisdiccional con celeridad.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima como vulnerados sus derechos al debido proceso y a la libertad, sin citar
norma constitucional alguna.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente” la acción de libertad y, por ende, se disponga que la jueza
demandada en el plazo de veinticuatro horas instale audiencia de cesación de detención
preventiva, con costas. Asimismo, en la audiencia, a tiempo de ratificar su demanda, pide que
establezca la responsabilidad correspondiente por no haberse fijado las audiencias de cesación a
su detención preventiva, ni haberse elaborado las actas correspondientes conforme dispone el
art. 120 del CPP.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 24 de febrero de 2012, según consta el acta cursante de fs. 64 a
66 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante ratificó su demanda y ampliando los fundamentos de la misma señaló que después
de reiteradas solicitudes de cesación a su detención preventiva, el 1 de febrero de 2012 volvió a
pedir este beneficio manifestando “señora Juez por favor señale otra audiencia de cesación yo
también soy persona al igual que otros detenidos en la cárcel, también ciudadano boliviano”, sin
embargo, la Jueza demandada fijó audiencia recién para el 8 de febrero del mismo año a horas
17:30, postergándola nuevamente para el 14 de febrero a horas 16:00, expresando “…habiendo
señalado audiencia de consideración de medidas cautelares se señala que la misma se realizará a
la conclusión del juicio oral”, oportunidad en que no instaló la audiencia de cesación a su
detención preventiva, indicando que “cuando acabemos este juicio recién este ciudadano va a
tener derecho a ser escuchado mediante cesación”.

Una vez concluido el juicio oral la Jueza demandada, en lugar de considerar su solicitud de
cesación a su detención preventiva sostuvo que “no habiendo más que tratar se suspende”, en
cuya situación le declaró “Señora Juez ya se ha hecho el juicio oral ¿y la cesación?”, que fue
respondida en sentido de que “se va a constituir en ambientes del juzgado” y, luego que fueron
al juzgado, tampoco se llevó a cabo.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Rosario Rodríguez Sánchez, Jueza Primera de Sentencia, en su informe escrito cursante a fs. 51,
solicitó se rechace “el recurso” acción de libertad, “declarándolo sin lugar a” y denegando la
acción, con costas, manifestando que: a) Radicada la causa seguida contra el acusado, por el
delito de transporte de sustancias controladas -ahora accionante- el 1 de diciembre de 2011,
señaló audiencia de juicio oral para el 5 de diciembre del mismo año, que fue suspendida por
inconcurrencia de partes; b) El acusado pidió audiencia de cesación a su detención preventiva el
9 del mismo mes y año antes señalado, empero, por las audiencias señaladas para atención de
juicio oral en varias otras causas se fijó este actuado procesal para el 19 del mismo mes y año, la
que fue suspendida por inconcurrencia del acusado, habiendo ocurrido similar situación el 16 de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 693
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

diciembre a la que no asistieron las partes; c) Las audiencias de juicio oral que en total suman
doce fueron suspendidas, unas veces por inasistencia del Fiscal y otras por el acusado o su
abogado, situación que llama la atención en razón a que tenían conocimiento de la realización de
dicho actuado judicial, en la que debería formularse conclusiones y dictarse la correspondiente
sentencia, constituyendo una burla a la administración de justicia; d) A la audiencia de medidas
cautelares de 8 de febrero de 2012, no asistió el acusado ni su abogado, suspendiéndose la
misma precisamente por inconcurrencia del peticionante, desde cuya fecha hasta la presentación
de la acción de libertad no existe petitorio de audiencia para consideración de medidas
cautelares; y, e) El accionante, con todo lo mencionado, no ha demostrado su voluntad de
someterse a juicio, por cuanto en reiteradas oportunidades no asistió a las tantas audiencias
señaladas, por lo que sus actos no se apartaron en ningún momento de las normas contenidas en
el procedimiento penal, además los fundamentos de la acción de libertad presentada no se
enmarcan a ninguno de los supuestos del art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.2.3. Resolución

El Tribunal Primero de Sentencia, constituido en Tribunal de garantías, mediante “Sentencia


Constitucional”, Resolución 02/2012 de 24 de febrero, cursante de fs. 67 a 72, concedió la
acción de libertad y dispuso que la Jueza demandada, señale audiencia pública a objeto de
considerar la solicitud de cesación a su detención preventiva dentro el plazo de veinticuatro
horas con costas y responsabilidad civil.

Alternativamente, dispuso la remisión de antecedentes en fotocopias legalizadas ante el Consejo


de la Magistratura del Departamento de Oruro, a los fines de establecer la responsabilidad
reclamada por el accionante.

Esta resolución, citando las SSCC 0244/2005-R, 1177/2004-R y 0128/2011-R, esgrimió los
siguientes fundamentos: 1) El señalamiento de audiencia ante la solicitud de cesación a su
detención preventiva de 9 de diciembre de 2011, se realizó dentro de nueves días, es decir, más
allá del plazo razonable y prudencial, la que además no se llegó a materializar. Se programó otra
para el 10 de enero de 2012, dentro de 12 días, que tampoco se llegó a realizar. Se volvió a fijar
audiencia de cesación para el 27 del mismo mes y año dentro de 17 días, actuación procesal que
fue suspendida, para llevarse el 31 de enero de 2012, oportunidad en la que de la misma forma,
ni siquiera se instaló porque el mismo día el órgano jurisdiccional tenía señalado audiencia de
continuación de juicio oral, concluyendo la misma a horas 18:00, produciéndose nuevamente
una suspensión sin que exista razón debidamente fundamentada. Asimismo, el 1 de febrero del
referido año reiteró dicho pedido, habiendo sido fijada para el 8 del indicado mes y año a horas
17:30, dentro de 7 días, que también fue suspendida, con el argumento que, al haberse señalado
audiencia para la consideración de medidas cautelares, esta se realizará a la conclusión del juicio
oral, condicionando su tratamiento a los actos del juicio oral; 2) La autoridad demandada,
prolongó el tratamiento de este actuado procesal en desmedro del derecho a la libertad del
“imputado” acusado, porque se señaló audiencia más allá de los plazos razonables. No
corresponde referirse a los motivos de suspensión que pueden o no ser atribuibles al imputado,
porque al margen de ello lo que importa es que la audiencia de cesación a la detención
preventiva, por estar vinculada a la libertad, debe realizarse a la brevedad posible, sin interesar
el resultado, por lo que la autoridad demandada ha restringido el derecho a la libertad del
accionante al prolongar indebidamente la consideración de la cesación de la detención
preventiva; y, 3) No tiene facultades para establecer responsabilidades ni imponer costas,
respecto a la falta de actas que estaba a cargo de la secretaria del juzgado de la autoridad
demandada, así como con relación al “gravísimo error” de la Jueza demandada, al no convocar a
la audiencia correspondiente de cesación.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 694


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes arrimados al expediente, se llega a las
conclusiones siguientes:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra Roberto Hilasaca López,
-ahora accionante- por la presunta comisión del delito de transporte de sustancias controladas, el
acusado solicitó el 9 de diciembre de 2011 audiencia de cesación de detención preventiva al
amparo de lo previsto en el art. 239.1 del CPP (fs. 1), la que fue señalada para el 19 de
diciembre del mismo año a horas 15:00 (fs.1 vta.). Esta fue suspendida para el 10 de enero de
2012 (fs. 6 y vta.) porque no asistió el acusado, debido a que no se expidió oportunamente orden
de salida del Penal en su favor, conforme consta de la diligencia que demuestra que recién se
notificó al Centro Penitenciario “San Pedro”, el 20 de diciembre de 2011, es decir un día
después del programado para la realización de la audiencia (fs. 7).

II.2. La audiencia de 10 de enero de 2012, también fue suspendida porque -a decir del acusado-
no pudo llegar debido a que el policía escolta tardó en tramitar su salida, fijándose día y hora
para el 27 del citado mes y año a solicitud del abogado defensor (fs. 15 vta.), fecha en la que
nuevamente se suspendió la audiencia (fs. 21) por inasistencia del acusado, señalándose para el
31 de enero del mismo año a horas 17:30 a solicitud del abogado defensor de oficio, ocasión en
la que tampoco se consideró la cesación de su detención preventiva, pese a la asistencia del
acusado a la audiencia de juicio oral, conforme se advierte del Acta de audiencia pública de
juicio oral (fs. 25 a 34).

II.3. El 1 de febrero de 2012, el acusado nuevamente pidió audiencia de cesación de detención


preventiva (fs. 35), la que se programó para el 8 de febrero del mismo año, mediante Auto de 2
de febrero de 2012 (fs.35 vta.), solicitud que tampoco se consideró por inasistencia del acusado
conforme consta el acta de audiencia pública de juicio oral en la que por una vez más se fijó día
y hora de audiencia para el 14 de febrero de 2012, que -según el tenor de dicha acta- se realizaría
“a la conclusión del juicio oral” (fs. 40 y vta.).

II.4 Contra la determinación asumida por la Jueza demanda en sentido de que se consideraría la
cesación a su detención preventiva a la conclusión del juicio oral, el accionante interpuso
recurso de reposición conforme lo previsto en el art. 401 del CPP, con el argumento que dicha
solicitud era independiente a la realización del juicio oral y que el hecho de que se hubiera
suspendido la misma era una situación diferente. Que los funcionarios se olvidaron enviar la
orden de salida del acusado, solicitando, por ende, que dentro de las veinticuatro horas se
convoque a una nueva audiencia de cesación a su detención preventiva (fs. 41).

II.5. Mediante Resolución 027/2012 de 13 de febrero, la Jueza demandada resolvió el recurso


reposición manteniendo su decisión, manifestando que del cuaderno procesal, se evidencia la
notificación al recinto penitenciario “San Pedro” Oruro, donde guarda detención preventiva el
acusado, quien no asistió a la audiencia de 8 de febrero y que “…reiteradas veces, en número de
10, desde 5 de diciembre de 2011 no asistió a audiencias señaladas, constituyendo una malicia
dilatoria del acusado. En consecuencia, no existe error en lo dispuesto, por lo que se mantiene
sin modificaciones el señalamiento de audiencia realizada el 8 de los corrientes. Sea con costas”
(fs. 42).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, sostiene que la Jueza Primera de Sentencia lesionó sus derechos al debido proceso
y a la libertad, por cuanto incurrió en evidente dilación y negligencia en la consideración de su
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 695
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

solicitud de cesación a su detención preventiva, además de suspender las audiencias


injustificadamente, entendiendo que la misma se consideraría a la conclusión del juicio oral y,
no obstante que interpuso recurso de reposición contra ésta última determinación, solicitando
que dentro de las veinticuatro horas se convoque a una nueva audiencia, la misma fue mantenida
mediante resolución judicial expresa. Corresponde analizar en revisión, si tales argumentos son
evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos al derecho a la libertad, a fin de conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. Las consecuencias del nuevo modelo de Estado Constitucional de Derecho,


Plurinacional e intercultural asumido en la Constitución de 2009 en el razonamiento
jurídico de los jueces

III.1.1. La aplicación directa de la Constitución

La Constitución es una norma jurídica directamente aplicable y justiciable por su órgano final de
aplicación, salvaguarda y garantía, de naturaleza judicial y de composición plurinacional
(Tribunal Constitucional Plurinacional) así como -atendiendo sus específicas atribuciones- por
los jueces y tribunales de garantías que ejercen justicia constitucional; sin exclusión de los
jueces o autoridades originarias de la pluralidad de jurisdicciones reconocidos en el texto
constitucional (Jurisdicción ordinaria, agroambiental, indígena originario campesina y las
jurisdicciones especializadas reguladas por la ley, conforme disponen los arts. 179 y 410 de la
CPE), últimos operadores jurídicos, que se constituyen en los garantes primarios de la
Constitución.

Ello, en razón a que la Constitución de 2009, supone un tránsito del Estado legal de Derecho al
Estado Constitucional de Derecho, o lo que es lo mismo, del Positivismo jurídico (legalismo) al
neoconstitucionalismo o constitucionalismo fuerte.

Cuando se alude al neoconstitucionalismo o al Estado Constitucional de Derecho, existe


uniformidad en la doctrina sobre la afirmación de las siguientes ideas: “El Estado constitucional
es un estadio más de la idea de Estado de Derecho, o mejor, su culminación” .En palabras de
Prieto Sanchís “no cabe duda que el Estado constitucional representa una fórmula del Estado de
Derecho, acaso su más cabal realización” .

El neoconstitucionalismo implica una versión mejorada del constitucionalismo liberal (Estado


legal de Derecho-Imperio de la ley, su consecuencia el principio de legalidad) y del
constitucionalismo social (Estado Social y Democrático de Derecho - Imperio de la ley aunque
con más atribuciones al Órgano Ejecutivo, pero manteniendo del principio de legalidad). A
diferencia de éstos, en el Estado Constitucional de Derecho todos los órganos del Estado se
encuentran sometidos a la Constitución: también el legislador. De ahí el imperio de la
Constitución y subordinada a ella, la ley - el legislador. Su corolario es la metamorfosis del
principio de legalidad, al principio de constitucionalidad, en razón al debilitamiento del primero.

Como anota el Profesor Pedro Talavera, “la lógica del principio de legalidad (sumisión del juez
a la ley) tradicionalmente sostenida por el positivismo europeo, de acuerdo con la teoría
garantista se transmuta en el principio de constitucionalidad (vinculación del juez a los valores,
principios y derechos consagrados en la constitución, más allá de la ley)”.

Por ello, con la expresión “Estado Constitucional de Derecho”, se alude a aquel modelo de
Estado que se caracteriza por la sujeción de los poderes públicos al ordenamiento jurídico, a
partir de la norma base (La Constitución), en la que se fundamenta todo el sistema (…) la
Constitución es el instrumento jurídico fundamental del País (parámetro normativo superior que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 696
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

decide la validez de las demás normas jurídicas). De ahí que sus normas, valores y principios,
constituyen el marco general básico del que se deriva y fundamenta el resto del ordenamiento
jurídico”.

Existe un tránsito en la concepción de la Constitución. De la reducción al carácter político -no


normativo- de la Constitución al carácter normativo de la Constitución (Estado Constitucional
de Derecho). La Constitución de este modelo “ya no es un trozo de papel o un mero documento
político, un conjunto de directrices programáticas dirigidas al legislador, sino una auténtica
norma jurídica con eficacia directa en el conjunto del ordenamiento”, es decir, deja de ser poesía
constitucional, para ser realidad constitucional.

El Tribunal Constitucional, contrastando las características esenciales del modelo de Estado de


la Constitución de 2009, ha reafirmado aquello, aunque sin reconocer aún el principio de
constitucionalidad, señalando en la SC 0258/2011-R de 16 de marzo que:

“El modelo de Estado asumido en Bolivia, se constituye en un verdadero Estado constitucional


de Derecho, establecido sobre valores universales y el principio fundamental de legalidad, sin
desechar los principios generales de soberanía popular en el ejercicio del poder público y
reforzando el principio de respeto y vigencia de los Derechos Humanos; pues se establece un
amplio catálogo de derechos fundamentales, garantías constitucionales, principios y valores;
además, se señalan como fines y funciones del Estado, entre otras, el garantizar el cumplimiento
de los principios, valores, derechos y deberes reconocidos y consagrados en la Constitución (art.
9.4 de la CPE), se señalan como deberes de los bolivianos y bolivianas el conocer, cumplir y
hacer cumplir la Constitución y las leyes, conocer, respetar y promover los derechos reconocidos
en la Constitución, y la práctica de los valores y principios que proclama la Constitución (art.
108 numerales 1, 2 y 3), así como también consagra de manera expresa el principio de legalidad
y supremacía constitucional en el art. 410.I de la CPE, señalando que: “Todas las personas,
naturales y jurídicas, así como los órganos públicos, funciones públicas e instituciones, se
encuentran sometidos a la presente Constitución”, añadiendo el segundo parágrafo que: La
Constitución es la norma suprema del ordenamiento jurídico boliviano y goza de primacía frente
a cualquier otra disposición normativa…”. (las negrillas son añadidas)

En el Estado Constitucional, la primacía de la Constitución desplaza a la primacía de la ley.


Surge la preponderancia del órgano judicial que exige de los jueces un razonamiento que
desborda la subsunción y por el contrario requiera la aplicación directa de la Constitución.

En ese orden de razonamiento, en el caso boliviano, siguiendo los cuatro modelos de


constitución que expone Comanducci en su reflexión acerca de cómo han sido concebidas las
constituciones, es posible concluir que la Constitución de 2009, se apunta en el modelo
axiológico de Constitución como norma, por las características que anota este autor. Así refiere:

“…la Constitución como un documento normativo que presenta características específicas que
lo distinguen de los otros documentos normativos y, particularmente, de la ley. Así: a) La
Constitución se sitúa en el vértice de la jerarquía de las fuentes y, además, modifica
cualitativamente esa jerarquía. El “leycentrismo”, del modelo estatal francés es sustituido por la
omnipresencia de la Constitución, que informa por sí misma a todo el sistema: por ejemplo, toda
la legislación es entendida como actuación de la Constitución y se interpreta a la luz de la
Constitución. Ya no resulta posible concebir los sistemas jurídicos como sistemas
exclusivamente dinámicos: se entienden más bien como sistemas estáticos; b) La Constitución
es un conjunto de normas (como en el tercer modelo) [referido al modelo descriptivo de
Constitución como norma]. Sin embargo, no sólo contiene reglas, sino también principios, que
son los que la caracterizan. Estos principios no son formulados necesariamente de modo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 697
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

expreso, y pueden ser reconstruidos tanto a partir del texto como prescindiendo de él; c) La
Constitución tiene una relación especial con la democracia, en un doble sentido: c.1) Hay una
conexión necesaria entre (una concepción de la) democracia –la democracia como isonomía- y
(el cuarto modelo de) Constitución (no puede haber Constitución sin democracia, ni democracia
sin Constitución); y, c.2) La Constitución funciona necesariamente como límite de la
democracia entendida como regla de mayoría; d) La Constitución funciona como puente entre el
derecho y la moral (o la política), ya que abre el sistema jurídico a consideraciones de tipo
moral, en un doble sentido: d.1) Los principios constitucionales son principios morales
positivizados; y, d.2) La justificación en el ámbito jurídico (sobre todo la justificación de la
interpretación) no puede dejar de recurrir a principios morales; y, e) La aplicación de la
Constitución, a diferencia de la ley, no puede hacerse por el método de la subsunción sino que,
precisamente por la presencia de los principios, debe realizarse generalmente por medio del
método de la ponderación o del balance“.

Entonces la supremacía de la Constitución normativa que fundamenta la validez de todo el


sistema jurídico plural de normas que la integra (art. 410.II de la CPE), no es per se (un mero
asunto de jerarquías y competencias-pertenencia formal) sino porque está cargada de normas
constitucionales-principios que son los valores, principios, derechos y garantías plurales que
coexisten, que conviven como expresión de su “base material pluralista” y se comunican entre sí
como expresión de su “base intercultural” y son los que informan el orden constitucional y legal,
sin renunciar a su contenido de unidad (art. 2 de la CPE).

De ahí que la Constitución de 2009, si bien es norma jurídica, no puede ser comprendida
únicamente sólo de manera formal. Esto significa que no puede ser concebida sólo como un
conjunto de normas (modelo descriptivo de Constitución como norma), a partir de un “concepto
de Constitución (como norma) simplemente documental”, con las denominaciones de
“constitución formal” o incluso de “constitución en sentido formal”, cuya primacía simplemente
se sustente y esté distinguida de las otras leyes por alguna característica formal (por ejemplo, los
procedimientos más complicados de producción, revisión y derogación). Por cuanto, lo que
esencialmente diferencia a las normas constitucionales de las otras leyes, es que las primeras son
prevalentemente normas constitucionales-principios (entiéndase por ello a la pluralidad de
valores supremos, principios constitucionales, derechos fundamentales y garantías
constitucionales) y supletoriamente normas constitucionales-reglas.

La SC 0258/2011-R de 16 de marzo, arriba citada, sobre el tema ha establecido que: “…la


Constitución es entendida actualmente no sólo de manera formal, como reguladora de las
fuentes del Derecho, de la distribución y del ejercicio del poder entre los órganos estatales, sino
como la Ley Suprema que contiene los valores, principios, derechos y garantías que deben ser la
base de todos los órganos del poder público, en especial del legislador y del intérprete de la
Constitución. Así, en el Estado constitucional de Derecho, las Constituciones tienen un amplio
programa normativo, con principios, valores, nutridos catálogos de derechos y garantías, que
vinculan a todos los órganos de poder y en general, a toda la sociedad y, en ese sentido,
contienen diferentes mecanismos jurisdiccionales y un órgano especializado para velar por el
cumplimiento de sus normas, frente a la lesión o incumplimiento, dando vigencia al principio de
supremacía constitucional” (el resaltado es añadido).

Las normas constitucionales-principios, establecidos en la Constitución, son las que influirán en


el significado jurídico de las normas constitucionales-reglas y normas legales-reglas (contenidas
en las leyes, códigos sustantivos y procesales) y no viceversa, o lo que es lo mismo, las segundas
y terceras deben adaptarse a las primeras para que exista coherencia del sistema, en razón a que -
como sostiene Gustavo Zagrebelsky- “sólo los principios desempeñan un papel propiamente
constitucional, es decir „constitutivo‟ del orden jurídico. Las reglas, aunque estén escritas en la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 698
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Constitución, no son más que leyes reforzadas por su forma especial. Las reglas, en efecto, se
agotan en sí mismas, es decir, no tienen ninguna fuerza constitutiva fuera de lo que ellas mismas
significan”.

Si esto es así, en la construcción judicial del nuevo derecho boliviano antes de mirarse a las
normas constitucionales-reglas o las normas legales-reglas (contenidas en las leyes, códigos
sustantivos y procesales) no debe perderse de vista a las normas constitucionales-principios.
Estas últimas con ojos de constructor jurídico, por cuanto si bien están formuladas de modo
expreso en la Constitución, verbigracia el caso de los principios ético-morales de la sociedad
plural (art. 8.I de la CPE), los valores del Estado plurinacional (art. 8.II de la misma norma),
etc., tarea que ya la hizo el legislador constituyente de composición plurinacional, ello no quita
que pueden ser desarrollados, judicialmente a partir de su texto, como labor que ahora le
compete a los jueces en sus diferentes roles. Al Tribunal Constitucional Plurinacional como
órgano final de aplicación, salvaguarda y garantía, a los jueces y tribunales de garantías, como
jueces constitucionales y a los jueces y tribunales de la pluralidad de jurisdicciones como
garantes primarios de la Constitución.

Las normas constitucionales-principios en la Constitución del 2009, representa un verdadero


quiebre de Constituciones con pretensiones de homogeneidad (Estado legal de Derecho), o
Constituciones integracionistas (Estado social de Derecho), para afirmar que estamos ante la
presencia de una Constitución plural (Estado Constitucional de Derecho).

Las normas constitucionales-principios en la Constitución boliviana, son la pluralidad de


valores, principios, derechos fundamentales no sólo individuales (liberales y sociales) sino un
amplio catálogo de derechos y garantías, principios y valores plurales y colectivos que la
Constitución representa como un pacto de postulados distintos y hasta veces contradictorios,
pero que al final deben coexistir. En esta situación se requiere más ponderación que subsunción,
que transforme las promesas constitucionales en realidades constitucionales.

III.1.2. El razonamiento jurídico de los jueces, debe partir de la Constitución, de sus


normas constitucionales-principios atendiendo las características del nuevo modelo de
Estado que los sustentan

El Estado boliviano, además de ser un Estado Constitucional de Derecho, también tiene carácter
Plurinacional, Comunitario e Intercultural, traspasado por la Unidad del Estado y la
Constitución, conforme refiere la Constitución desde su Preámbulo y se enfatiza en el art. 1 de la
CPE, que establece:

“Bolivia se constituye en un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario,


libre, independiente, soberano, democrático, intercultural, descentralizado y con autonomías.
Bolivia se funda en la pluralidad y el pluralismo político, económico, jurídico, cultural y
lingüístico, dentro del proceso integrador del país”.

Del art. 1 de la CPE, resulta que el Estado Unitario asumido, no puede concebirse sin lo social,
sin lo plurinacional, comunitario e intercultural ni la característica de Estado Constitucional de
Derecho. Lo anterior supone, entonces, que las formas clásicas para designar al Estado como
“Estado de Derecho”, “Estado Social y Democrático de Derecho”, resultan insuficientes para
caracterizar al nuevo modelo y clasificarlo, pues se nutre de diferentes principios y valores que
vienen de la tradición del constitucionalismo liberal (Estado de Derecho), del constitucionalismo
social (Estado Social y Democrático de Derecho) y del Estado Constitucional de Derecho
(neoconstitucionalismo), pero además, con una particularidad esencial que distingue y que
marca el horizonte de este nuevo Estado: el carácter plurinacional e intercultural (Estado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 699
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

plurinacional e intercultural) que se asienta en el derecho a la autodeterminación de los pueblos


indígenas”.

En efecto, la verificación de las teorías y conceptos del neoconstitucionalismo, el Estado


Constitucional o el constitucionalismo “fuerte”, en su concepción como una nueva teoría general
del derecho, hace que sea posible afirmar que la Constitución, lleva implícito en todo su texto
“la característica de Estado Constitucional”, pero además, “Plurinacional e intercultural”
traspasado por la “Unidad de Estado o Estado Unitario”.

De ahí que la Constitución de 2009, inicia un constitucionalismo sin precedentes en su historia,


que es preciso comprender para construir, hilar una nueva teoría jurídica del derecho boliviano,
en una secuencia lógica que va desde la comprensión de este nuevo derecho hasta los criterios
para su aplicación judicial. Esto debido al nuevo modelo de Estado ínsito en el texto
constitucional.

La transformación de este constitucionalismo, hasta tomar la forma de plurinacional e


intercultural en este nuevo paradigma de Estado, si bien está en la Constitución, empero deberá
construirse, con un rol preponderante de los jueces a través de su labor decisoria cotidiana.

Una mirada a la transformación del constitucionalismo boliviano en su historia, esto es, los hitos
y características de los modelos de Estado de Derecho imperantes en cada periodo, demuestran
la transfiguración del “constitucionalismo monocultural” al “constitucionalismo plurinacional e
intercultural”, este último, traspasado por la “Unidad del Estado y de la Constitución”.

El constitucionalismo en Bolivia nace como monocultural, caracterizado por el


monoculturalismo y el monismo jurídico, puesto que parte de la “idea del Estado-nación”, “bajo
la identificación del Estado con una sola nación y cultura, no obstante la realidad plural”. Para
ello, baste mirar la estructura o sistemática interna de cada Constitución que se inscribe a este
ciclo, donde se advierte que en su diseño únicamente se tomó como parámetros los valores
culturales de un solo grupo, en una evidente primacía de una cultura (la occidental) sobre las
demás (de los pueblos indígenas, originario, campesinos) con relación negativa entre grupos
culturales.

En ese orden, siguiendo a Raquel Irigoyen Fajardo y su clasificación de los horizontes del
constitucionalismo en Latinoamérica, es posible afirmar que la Constitución de 2009, se inscribe
en el tercer horizonte de constitucionalismo pluralista que inicia desde finales del siglo XX a la
fecha, en su tercer ciclo de constitucionalismo plurinacional, que se da en el contexto de la
aprobación de la Declaración de Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas
aprobado el 13 de septiembre de 2007.

En efecto, el carácter Plurinacional implica el quiebre de los fundamentos del Estado-nación


basado en el monoculturalismo y el monismo jurídico, pues no sólo reconoce a los pueblos
indígenas como culturas diferentes -en el marco de una noción multicultural- sino como
“naciones”, entendiendo a éstas no únicamente como comunidades históricas con un territorio
natal determinado que comparte lengua y cultura diferenciada, sino como pueblos con capacidad
política para definir sus destinos (libre determinación) aunque en el marco de la unidad del
Estado, de acuerdo a lo previsto por el art. 2 de la CPE.

En ese entendido, como anota el profesor Alberto del Real Alcalá, la Constitución boliviana
quiebra el modelo de Estado propio del “liberalismo homogeneizador decimonónico” y, por
consiguiente, quiebra la nación jacobina, abstracta, uninacional, centralista y unicultural que ha
sido altamente ineficaz desde todos los puntos de vista a la hora de gestionar una sociedad plural
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 700
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

como la de Bolivia y que en la práctica ha fulminado e invisibilizado cualquier diferencia étnica,


cultural o nacional e instaura en su lugar, un “Estado Constitucional de Derecho de carácter
Plurinacional”.

Es, entonces, el carácter plurinacional, el cambio más trascendente en el modelo de Estado


asumido en Bolivia y se constituye, en el “hecho fundante básico” del Estado y de la
Constitución boliviana, como corolario del reconocimiento -de conformidad con la Declaración
de las Naciones Unidas de los Derechos de los Pueblos Indígenas- de la igual dignidad de los
pueblos y personas indígenas (art. 9.2, 14.II y II de la CPE) y, fundamentalmente, del derecho a
la libre determinación en el marco de la unidad del Estado (art. 2 de la CPE).

Respecto, al Estado Plurinacional, la SC 0258/2011-R, antes mencionada, entendió que:

“Además de ser un Estado constitucional de Derecho, el Estado boliviano también tiene carácter
Plurinacional (art. 1 de la CPE), por el cual se quiebran los fundamentos del Estado nación
caracterizado por el monoculturalismo y el monismo jurídico y se reconoce a los pueblos
indígena originario campesinos como naciones, con capacidad política para definir sus destinos
(IRIGOYEN FAJARDO, Raquel, El horizonte del constitucionalismo pluralista: del
multiculturalismo a la descolonización), aunque en el marco de la unidad del Estado, conforme
lo determina el art. 2 de la CPE. En ese entendido, y siguiendo a Alberto del Real Alcalá, la
Constitución boliviana quiebra el modelo de Estado propio del „liberalismo homogeneizador
decimonónico y, por consiguiente, quiebra la nación jacobina, abstracta, uninacional, centralista
y unicultural que ha sido altamente ineficaz desde todos los puntos de vista a la hora de
gestionar una sociedad plural como la de Bolivia; y que en la práctica ha fulminado e
invisibilizado cualquier diferencia étnica, cultural o nacional. E instaura, en su lugar, un Estado
Constitucional de Derecho de carácter Plurinacional‟ (DEL REAL ALCALÁ, Alberto, „La
construcción de la Plurinacionalidad desde las resoluciones del nuevo Tribunal Constitucional
Plurinacional de Bolivia: Desafíos y resistencias, en Hacia la construcción del Tribunal
Constitucional Plurinacional, Memoria Conferencia Internacional, CONCED, GTZ, Bolivia,
2010)‟”.

III.1.2.1. Concepción, validez, jerarquía normativa, obligatoriedad y transversalidad de los


principios constitucionales

Concepción

Existe uniformidad en la doctrina y jurisprudencia constitucional comparada en reconocer, de


manera general, que los textos constitucionales están integrados prevalentemente por normas
constitucionales-principios (Constituciones principistas) y también en la primacía de éstas
respecto de las normas constitucionales-reglas (ante eventuales “antinomias” que salven la
coherencia del sistema normativo). Entonces, con mayor razón, la primacía de las normas
constitucionales-principios respecto de las normas legales-reglas (contenidas en las leyes
formales o materiales, códigos sustantivos o procesales, disposiciones reglamentarias en general,
etc.).

El tema fue analizado, entre otros, por Jaime Araujo, quien luego de preguntarse: ¿Qué sucede si
una norma de la Constitución choca con otra norma constitucional que consagra un principio
fundamental?, respondía de manera categórica que debe primar el último de los nombrados.

Tan evidente es la realidad normativa de los principios, que autores como Allier Campuzano,
hablan de la “Inconstitucionalidad de normas constitucionales”, es decir, la posibilidad de que
un artículo cualesquiera (norma constitucional-regla), se oponga a los valores, principios,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 701
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derechos fundamentales y garantías (normas constitucionales-principio), es decir, encuentre


contradicción. Luego reflexiona sobre la posible inconstitucionalidad de reformas
constitucionales que afecten la base principista de la constitución (las decisiones políticas
fundamentales, como las denomina).

Esta cuestión también fue abordada por el Tribunal Federal Alemán y el Tribunal Supremo de
Estados Unidos en uno de sus fallos, en los que se alude a “…posibles normas “constitucionales
inconstitucionales”, concepto con el que se pretende subrayar, sobre todo, la primacía
interpretativa absoluta de los principios sobre las demás normas de la Constitución y el límite…
que suponen a la reforma constitucional”.

Entonces, lejos de ingresar a la clásica tesis entre el positivismo y el iusnaturalismo, para ser
coherentes con la característica del nuevo modelo de Estado que se configura como “Estado
Constitucional de Derecho”, afirmamos que no obstante la diversidad de denominaciones en la
doctrina y en la jurisprudencia para referirse a los principios de la Constitución (“principios del
régimen político”, “principios institucionales fundamentales”, “principios fundamentales”,
“principios del derecho constitucional”, “principios supremos de la constitución” o “principios
constitucionales”), con igual significado en todo contexto, cuando se habla de los principios de
la Constitución, de manera general se alude inequívocamente a las “decisiones que fundamentan
todo el sistema constitucional en su conjunto: la decisión por la democracia, la decisión por el
Estado de Derecho y por el Estado social de Derecho, la decisión por la libertad y por la
igualdad, la decisión por las autonomías territoriales, etc.”.

En el caso de la Constitución vigente, la decisión por un “Estado Constitucional de Derecho


Plurinacional e intercultural”, la decisión por un “Estado social de Derecho” o como lo
denomina el profesor Real Alcalá “Estado de Derecho del “Buen vivir”, la decisión por “la
democracia”, la decisión por “la Unidad de la Constitución y del Estado”, la decisión por el
“pluralismo jurídico de tipo igualitario”, la decisión por la “interculturalidad”, “la decisión por la
eficacia directa de los derechos fundamentales”, “la decisión por la defensa de la Constitución
por jueces independientes e imparciales de composición plural”, “la decisión por asumir y
promover los principios ético-morales en toda la estructura del Estado”, etc.

De ahí que, englobando unívocamente a los principios en distinción con las reglas preferimos
llamarlos normas constitucionales-principios. Estas no son otra cosa que los valores, principios,
derechos fundamentales y garantías constitucionales, es decir, la “moral objetivada-positivada”,
“meta-normas” que informan, orientan al poder público y a la convivencia social, las relaciones
entre el ciudadano y el Estado y entre particulares, que si bien se agotan en su positivización
constitucional, empero encuentran una construcción judicial constante, siempre y cuando se
salvaguarde la unidad del ordenamiento, es decir, su coherencia.

Corresponde a la jurisprudencia proferida por el Tribunal Constitucional Plurinacional -en su


función de intérprete final del orden constitucional y uniformador del nuevo derecho- precisar
sus alcances normativos a través de la interpretación que desentrañe el sentido del principio en
cuestión, esto, sin exclusión de la tarea de los jueces y las autoridades originarias de la
pluralidad de jurisdicciones reconocidos en la Constitución, en su actividad decisoria cotidiana.

En palabras de Prieto Sanchís -el constitucionalismo boliviano apunta, “En favor de un


constitucionalismo moderadamente positivista”. Al moralizar el derecho o juridificar la moral, lo
que queda es: “la moral juridificada [que] se agota…en la Constitución”. Es decir, a crear un
nexo entre moralidad y derecho. Sí, pero no una moralidad que esté deambulando en la cabeza
del intérprete, sino que está positivada objetivada -por decisión del constituyente- en la
Constitución (en sus valores, principios, que no es otra cosa que la moral positivada). Moral
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 702
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

positivada que se agota en la Constitución. Evidente. Empero, puede ser desarrollada y


reconstruida jurisprudencialmente limitada a ella.

Siguiendo esta línea de pensamiento, el profesor Eduardo García de Enterría anota que “La
unidad del ordenamiento es, sobre todo, una unidad material de sentido, expresada en unos
“principios generales del Derecho” [principios constitucionales], que o al intérprete le toca
investigar y descubrir (sobre todo, naturalmente, al intérprete judicial, a la jurisprudencia), o la
Constitución los ha declarado de manera formal, destacando entre todos, por la decisión suprema
de la comunidad que la ha hecho, unos valores sociales determinados que se proclaman en el
solemne momento constituyente como primordiales y básicos de toda la vida colectiva”, por
cuanto “son las normas más fundamentales y generales del sistema constitucional, tienen por
objeto la determinación de los rasgos esenciales o definitorios del sistema político (núcleo de la
Constitución), determinan en tal sentido, el titular del poder, la modalidad de su ejercicio, los
fines a él asignados, así como la máxima jerarquía de la Constitución, en conjunto vienen a
configurar antológicamente la identidad de la Constitución”.

La validez, jerarquía normativa, obligatoriedad y transversalidad de los principios


constitucionales

Prieto Sanchís, afirma que “Los principios constitucionales han sido muchas veces criticados o,
simplemente se les ha negado valor normativo por su carácter ambiguo, vago, elástico,
incompleto, etc., que representaría una invitación al desbordamiento del activismo judicial”.
Esto deviene, según Gustavo Zagrebelsky del “persistente prejuicio de pensar que, en realidad,
las verdaderas normas son las reglas, mientras que los principios son un plus, algo que sólo es
necesario como „válvula de seguridad‟ del ordenamiento”.

Ahora bien, la validez normativa, jerarquía y obligatoriedad de las normas constitucionales-


principios en la Constitución de 2009, con relación a las normas constitucionales-reglas (el
grueso de las normas de la constitución) y de las primeras respecto de las normas legales-reglas
(contenidas en la leyes en sentido general sustantivas o procesales), si bien no tiene asidero en
una norma parecida a la contenida en el art. 229 de la CPEabrg que señalaba: “Los principios,
garantías y derechos reconocidos por esta Constitución no pueden ser alterados por las leyes que
regulen su ejercicio ni necesitan de reglamentación previa para su cumplimiento”, -debido a que
no existe un precepto constitucional explícitamente- su fundamento contundente hay que
encontrarlo en el carácter normativo-axiológico de la propia Constitución.

Un entendimiento en contrario significaría negar la base principista-axiológica de la propia


Constitución, sosteniendo que aquélla sólo tiene validez, jerarquía y es obligatoria respecto a las
normas constitucionales-reglas, porque la propia Constitución así lo establece, afirmando que si
la propia Constitución no predica tal situación expresamente, carece de tal virtud.

Consecuentemente, las normas constitucionales-principios, establecidas en el texto


constitucional tienen validez normativa, prelación jerárquica y son obligatorias respecto a las
normas constitucionales-reglas y con mayor razón con relación a las normas legales-reglas
(contenidas en las leyes en sentido general sustantivas o procesales) por el sólo hecho de estar
inscritas en la Constitución, una Constitución ideada dentro del modelo de Estado
Constitucional, con todo lo que ello implica.

No obstante lo manifestado -sin entrar en contradicciones y únicamente como un ensayo


pedagógico- para quienes es más cómodo encontrar normas positivas que demuestren la base
principista de la Constitución, su reconstrucción jurisprudencial puede partir: del Preámbulo de
la Constitución que utiliza un lenguaje contundente. “Un Estado basado en el respeto e igualdad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 703
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

entre todos con principios de…”. Normas que señalan: “El Estado se sustenta en los valores
de…” (art. 8.II), “las normas laborales se interpretarán y aplicarán bajo los principios…”(art.
48.II) y preceptos similares como: “la potestad de impartir justicia … se sustenta en los
principios…”(art. 178.I), etc. Esas mismas locuciones “se sustenta”, “se basa”, “se regirán”, “se
interpretarán”, se repiten como letanía en todo el texto constitucional (el subrayado es añadido)

La obligatoriedad de las normas constitucionales-principios, claramente se visualiza en el art.


9.4 constitucional, que señala que son fines y funciones esenciales del Estado, garantizar el
cumplimiento de los principios, valores, derechos y deberes reconocidos y consagrados en esta
Constitución, norma concordante con el art. 108.3 del Capítulo de los Deberes de los
ciudadanos/as que dice que deben “Promover y difundir la práctica de los valores y principios
que proclama la Constitución”.

Estos mandatos jurídicos son para todo el poder público y para la convivencia social de los
ciudadanos. A los legisladores (del nivel central-Asamblea Legislativa Plurinacional, las
entidades territoriales autónomas) y a las naciones y pueblos indígena originario campesinos), al
momento de realizar desarrollo legislativo o en la interpretación y aplicación del Derecho
Indígena “en sentido de que en el proceso de creación de las normas no ignore los principios,
toda vez que al ser estos la base en la que se inspira el modelo de sociedad que la Constitución
propugna, debe existir coherencia y armonía entre la ley a crearse y los principios de la
Constitución”. Al Órgano Ejecutivo, en el ejercicio de su potestad reglamentaria (emisión de
decretos supremos, resoluciones supremas, etc.), a las autoridades judiciales o administrativas en
la interpretación y aplicación de la Constitución y la Ley y principalmente al Tribunal
Constitucional Plurinacional, como defensor y garante de la Constitución axiológica y
normativa, en su labor decisoria cotidiana.

Así ya lo entendió el Tribunal Constitucional el año 2005, en la SC 773/2005-R de 7, de julio al


establecer que: “Los principios fundamentales ocupan un lugar preponderante en nuestro
ordenamiento constitucional, dado que conforme al art. 229 de la CPE, están en la cúspide del
mismo. Estos principios hacen referencia a las normas que fundamentan todo el sistema
constitucional y tienen por objeto determinar los rasgos esenciales del sistema político, la
titularidad del poder, la modalidad de su ejercicio, así como su finalidad. Estos principios
constituyen verdaderos mandatos jurídicos, dirigidos, en primer término, al legislador -y
también al órgano ejecutivo, cuando asume su facultad reglamentaria- , para que sean tomados
en cuenta en el proceso de creación de las normas, pues al ser éstos la base en la que se inspira el
modelo de sociedad que la Constitución propugna, debe existir armonía entre la ley a crearse y
los principios constitucionales. En segundo término, los principios, como mandatos jurídicos,
también se dirigen a las autoridades judiciales o administrativas que van a aplicar las normas
jurídicas, en el entendido que al ser jerárquicamente superiores, presiden la interpretación de
todo el ordenamiento, e inclusive de la Constitución misma. Las funciones anotadas, coinciden
con el carácter informador del ordenamiento jurídico, que tienen los principios; carácter que, de
acuerdo a la doctrina, implica que estos principios son directrices para la elaboración de las
leyes y para la labor interpretativa, además de ser un parámetro para determinar la
inconstitucionalidad de las normas, conforme lo anota el art. 3 de la Ley del Tribunal
Constitucional (LTC).[Entonces] „La Constitución se tendrá por infringida cuando el texto de
una ley, decreto, resolución o actos emanados de autoridad pública o de persona particular,
natural o jurídica, sus efectos o su interpretación en relación a un casa concreto, sean contrarios
a las normas o principios de aquélla‟” .

En la labor hermenéutica de los jueces -que bien puede aplicarse en todos los poderes públicos-
el Profesor Willman Durán Ribera, citando las SSCC 1110/2002-R y 136/2003-R, propone un
control de constitucionalidad (en sus ámbitos de control normativo, competencial y de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 704
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

protección de derechos fundamentales) que empiece con la contrastación de los principios,


respecto de las reglas. Señala que “a la hora de hacer el control de constitucionalidad, no sólo se
debe contrastar la norma impugnada con el texto de las normas constitucionales supuestamente
infringidas, sino que tal juicio de constitucionalidad debe de extenderse a los principios, y por
qué no empezar el contraste con ellos”. En el constitucionalismo plurinacional e intercultural,
bajo la idea de “Estado constitucional de Derecho plurinacional e intercultural traspasado por la
Unidad de Estado”, ese paradigma debe ser acogido.

Finalmente, las normas constitucionales-principios, tienen un efecto de irradiación y


transversalidad en el resto de las normas constitucionales y todo el ordenamiento jurídico. En
efecto, la base principista, fundamentalmente contenida en la parte dogmática de la Constitución
(principios, valores, derechos y garantías), guían la acción de los órganos del poder público y de
la propia convivencia social, o lo que es lo mismo, la organización del poder (parte orgánica)
que debe desarrollarse sobre la base de la parte dogmática.

III.2. Las normas constitucionales-principios, que sustentan que las decisiones judiciales
vinculadas al derecho a la libertad personal sean: 1) tramitadas, 2) resueltas y 3)
efectivizadas con la mayor celeridad

Conforme se desarrolló en el acápite anterior, las normas constitucionales-principios son los


valores, principios, derechos fundamentales y garantías constitucionales previstos en la
Constitución. De ello se tiene, que en lo conducente al problema jurídico motivo de esta
sentencia constitucional, son:

1) El derecho fundamental a la libertad personal, ahora consagrado en los arts. 23.I de la CPE,
9.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP),y 7.1 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos (CADH).

2) La dignidad humana de la persona, en su doble dimensión, como derecho fundamental y valor


supremo, consagrado en el art. 22 de la CPE.

A efectos del problema jurídico de análisis nos referimos a dignidad humana de la persona como
individuo. Esto debido a que conforme reflexiona el profesor Alberto del Real Alcalá, la
Constitución, declara en el art. 22 de la CPE, como principio inviolable la dignidad de la
persona y en virtud de la plurinacionalidad consagrada en el texto Constitucional, la dignidad
colectiva (de las naciones y pueblos indígenas originario campesinos, de las comunidades
interculturales y afrobolivianas) como titulares del ejercicio de este derecho, cuyo respeto y
protección es “deber primordial” del Estado.

Al respecto el citado profesor señala “La plurinacionalidad es la „joya de la Constitución‟


boliviana. Su raíz moral se encuentra en el valor general de la „dignidad humana‟ tanto de
individuos (dignidad de la persona) como de colectivos (dignidad colectiva). Este dato ayudará a
determinar prima facie a los „titulares‟ portadores de su ejercicio como derecho: las personas
individuales (bolivianos y bolivianas) y asimismo los grupos colectivos reconocidos por la CPE
pueden ser titulares de los derechos derivados de la plurinacionalidad que reconoce como
derechos fundamentales la CPE”.

Los principios ético-morales de la sociedad plural

El art. 8.I de la CPE, refiere que: “El Estado asume y promueve como principios ético-morales
de la sociedad plural: ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no seas flojo, no seas mentiroso ni seas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 705


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ladrón), suma qamaña (vivir bien), ñandereko (vida armoniosa), teko kavi (vida buena), ivi
marei (tierra sin mal) y qhapaj ñan (camino o vida noble)”

Los principios ético-morales, antes de ser incorporados a la Constitución, tenían valor


únicamente para el Derecho Indígena, es decir, eran estimados como valiosos por la cultura y el
Derecho de las naciones y pueblos indígena originario, campesinos. Después de efectuada su
incorporación en el texto constitucional tienen valor de derecho, es decir se convierten en
normas y, por tanto, comparten la eficacia jurídica de la propia Constitución, es decir, tienen
carácter normativo, lo que implica que no son meras declaraciones retóricas, por lo mismo,
imponen a todos, esto es, al poder público y los particulares en la convivencia social, con mayor
razón a todos los jueces de la pluralidad de jurisdicciones, la obligación de observarlos,
desarrollarlos y aplicarlos en su labor decisoria cotidiana.

Conforme anota el Profesor Alberto del Real Alcalá, “La base moral de la dignidad humana que
está en la plurinacionalidad incluye a todos los „principios ético-morales de la sociedad plural‟
reconocidos por la CPE, y que „asume‟ el Estado como propios y se compromete a „promover‟
(art. 8.I de la CPE): “ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no seas flojo, no seas mentiroso ni seas
ladrón), suma qamaña (vivir bien), ñandereko (vida armoniosa), teko kavi (vida buena), ivi
maraei (tierra sin mal) y qhapaj ñan (camino o vida noble)”.

Este Tribunal Constitucional Plurinacional en la SCP 0015/2012 de 16 de marzo, en un caso


análogo al presente, en el que se denunció falta de celeridad en la tramitación de una solicitud de
cesación a la detención preventiva, debido a que el juez, pese a que tenía conocimiento de dicha
solicitud verificado con el cargo de recepción del memorial, alegó que no conoció ni tramitó
dicha petición porque su juzgado se encontraba en suplencia y que el acta y el mandamiento de
detención preventiva estaban extraviados, entendió que la autoridad judicial soslayo la
observancia del principio ético moral “ama qhilla” (no seas flojo), al no atender de manera
diligente la solicitud de cesación a la detención preventiva, justificando su descuido en
situaciones de su entera responsabilidad. Los fundamentos de la aplicación, los principios éticos
morales, en este supuesto son:

“De acuerdo al nuevo orden constitucional, el art. 8.I de la CPE, dentro de los principios y
valores del nuevo Estado Plurinacional de Bolivia, asume y promueve como de carácter ético
morales de la sociedad plural, el „ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no seas flojo, no seas
mentiroso ni seas ladrón)‟; máximas milenarias que fueron constitucionalizadas y resumen de
manera extraordinaria la moral de toda persona, natural o jurídica debe practicar en todas sus
actividades. En ese sentido, se hace énfasis en el principio del ama qhilla, que establece una
conducta de la vida diligente que debe observar todo individuo, con mayor razón un servidor
público como es el juez, del cual debe exigirse una actitud acuciosa en la administración de
justicia, sobre todo cuanto afecta a un vivir bien, así como a una vida armoniosa.

Los principios ético morales constitucionalizados: „ama qhilla, ama llulla y ama suwa‟,
vinculados entre sí, constituyen directrices de obligada observancia por los servidores de justicia
cuando resuelven derechos y garantías constitucionales, están en el deber imperativo de
impulsar, ser director y promotor del proceso, velando su desarrollo, siendo responsables de
cualquier demora por su inactividad, impulsando la nueva justicia en el nuevo Estado
Plurinacional”.

Los principios procesales de celeridad y de respeto a los derechos, previstos en el art. 178.I de la
CPE.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 706


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

4.1. El principio de celeridad procesal, previsto en el art. 178.I concordante con el art. 180.I,
ambos de la CPE, que según el desarrollo legal (art. 3.7, Ley 025 de 24 de junio de 2010),
comprende el ejercicio oportuno y sin dilaciones en la administración de justicia.

4.2. El principio de respeto a los derechos, que según el desarrollo legal (art. 3. 12 de la Ley 025,
de 24 de junio), es la base de la administración de justicia, que se concreta en el respeto al
ejercicio de derechos del pueblo boliviano, basados en principios ético–morales propios de la
sociedad plural que promueve el Estado Plurinacional y los valores que sustenta éste.

III.2.1. La reglas procesales penales, en medidas cautelares, construidas


jurisprudencialmente, en observancia de los principios constitucionales.

En el Código de Procedimiento Penal no existe una norma procesal que expresamente disponga
un plazo máximo en el cual debe fijarse y realizarse la audiencia de consideración de la cesación
a la detención preventiva. Esta situación ha determinado que la justicia constitucional, a través
de su labor hermenéutica haya desarrollado entendimientos jurisprudenciales al respecto, a partir
de la observancia de la base principista aplicable de la Constitución.

El Tribunal Constitucional anterior, que judicializó la Constitución abrogada, resolvió el


problema jurídico, contrastándolo con las normas constitucionales-principios de la Constitución
abrogada en las siguientes sentencias constitucionales, generando las consiguientes reglas
procesales construidas vía jurisprudencia. Así se tiene los fallos más relevantes, entre otros, que
se los glosa como ejemplos en la presente resolución:

La SC 1036/2001-R de 21 de septiembre, en un caso en el que se evidenció que el juez de la


causa demoró en tramitar y resolver la solicitud de cesación a la detención preventiva, el
Tribunal Constitucional, contrastando el problema jurídico planteado con las normas
constitucionales-principios: el derecho fundamental a la libertad personal, principio de celeridad
y la garantía del debido proceso otorgó la tutela, advirtiendo que la circunstancia de que exista
señalamiento de audiencia antes de la interposición del recurso de hábeas corpus –ahora acción
tutelar- de ninguna manera hacía desaparecer la ilegal dilación que sufrió el procesado. La regla
procesal construida jurisprudencialmente, subregla en sentido estricto, es la siguiente:

Toda petición de cesación de la detención preventiva debe ser resuelta de manera inmediata por
estar vinculada al derecho fundamental a la libertad personal, caso contrario se incurre en
detención y procesamientos indebidos, en vulneración de los arts. 6, 16 y 116-X de la de la
Constitución Política del Estado y 8-1 del Pacto de San José de Costa Rica.

Los fundamentos relevantes de esta sentencia son:

“…el art. 16 de la Constitución Política del Estado, entre otros, resguarda el derecho a ser
juzgado sin dilaciones indebidas, derecho que guarda concordancia con el principio de celeridad
procesal que debe regir en todo proceso por disposición del art. 116-X de la misma Constitución
y el art. 8-1 del Pacto de San José de Costa Rica.

Que la petición de RSC (…) solicitando la cesación de la detención preventiva debió ser resuelta
de manera inmediata, más aún cuando se trata de una solicitud que está vinculada al
restablecimiento de un derecho fundamental que no puede ser restringido ni suprimido y que al
prolongar la detención sin pronunciarse oportunamente se incurre en una detención y
procesamientos indebidos, lo que se traduce en una flagrante violación de los arts. 6, 16 y 116-X
de la de la Constitución Política del Estado y 8-1 del Pacto de San José de Costa Rica.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 707


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Que RSC (…) al demandar de las autoridades competentes la consideración de su solicitud y una
pronta resolución lo hace dentro del marco legal, por lo que dicha petición no puede estar
supeditada a las inoportunas actuaciones del personal en el despacho y actuaciones del Tribunal
constituido, cuyos miembros deben cumplir las responsabilidades propias de su competencia
más aún cuando se encuentra de por medio la libertad de las personas”.

Que la circunstancia de que exista un señalamiento de audiencia para el 27 de agosto de 2001,


de ninguna manera hace desaparecer la ilegal dilación que ha sufrido la petición del procesado
que data del mes de octubre de 2000”.

La SC 0579/2002-R de 20 de mayo, en un caso en el que se evidenció que el juez de la causa


demoró en tramitar y resolver la solicitud de cesación a la detención preventiva por más de seis
meses, aduciendo entre otras causales la inasistencia del fiscal, el Tribunal Constitucional,
contrastando el problema jurídico planteado con las normas constitucionales-principios: el
derecho fundamental a la libertad personal y el principio de celeridad, otorgó la tutela,
generando la siguiente regla procesal penal construida jurisprudencialmente:

Las peticiones vinculadas a la libertad personal, deben ser atendidas de forma inmediata si no
existe una norma que establezca un plazo, y si existe, debe ser cumplido estrictamente. En cuyo
caso, no puede suspenderse la audiencia de cesación a la detención preventiva por la
inconcurrencia del fiscal, al no ser imprescindible su presencia.

Los fundamentos relevantes de esta sentencia son:

“…las Sentencias Constitucionales 758/00-R y 1070/01-R entre otras establecen que el principio
de celeridad procesal consagrado por el art. 116-X de la CPE., impone a quien administra
justicia el deber jurídico de despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones
indebidas; exigencia que se hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad
personal, toda vez que tales peticiones deben ser atendidas de forma inmediata si no existe una
norma que establezca un plazo, y si existe, debe ser cumplido estrictamente. Que esta línea
jurisprudencial es aplicable al caso de autos por cuanto la autoridad judicial recurrida ha
suspendido sin motivo alguno las audiencias señaladas para tratar y resolver la cesación de
detención preventiva solicitada por los recurrentes hace seis meses atrás, aduciendo entre otros
motivos la ausencia de la autoridad fiscal, cuya concurrencia no es imprescindible para estas
actuaciones. Que el Juez recurrido al no haber tramitado en forma inmediata y oportuna la
referida cesación de detención preventiva de conformidad con los arts. 239 y 240 del nuevo
CPP, es evidente que ha demorado el trámite de manera inadmisible, atentando contra la
normativa citada así como contra el art. 116-X de la C.P.E. y el derecho a la libertad de los
recurrentes”. Que el Fiscal recurrido no concurrió a la audiencia de cesación de detención
preventiva con la que fue legalmente notificado, sin embargo, esta inconcurrencia no vicia de
nulidad dicho actuado judicial y tampoco incide en su falta de resolución, extremo que es
imputable únicamente al Juez de la causa”. (el subrayado es añadido)

Una sentencia con supuestos fácticos análogos a la SC 0579/2002-R es la SC 0248/2002-R de 8


de marzo, en la que además se incluyó como fundamento principista lo dispuesto en el art. 8.1
del Pacto de San José de Costa Rica o Convención Americana de Derechos Humanos.

La SC 0224/2004-R de 16 de febrero, en un caso en el que evidenció que la causa de la demora


en tramitar y resolver la cesación a la detención preventiva era atribuible y provocada por la
parte imputada debido a sus solicitudes de suspensión de audiencia en las que aducía que no
cumplía con los requisitos exigidos con el art. 239.1 del CPP; el Tribunal Constitucional,
contrastando el problema jurídico planteado con las normas constitucionales-principios: el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 708
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derecho fundamental a la libertad personal y el principio de celeridad, denegó la tutela,


generando la siguiente regla procesal penal construida jurisprudencialmente:

Las solicitudes vinculadas a la libertad personal, deben ser tramitadas y resueltas con la mayor
celeridad posible. Empero, no se podrá alegar dilación indebida de la autoridad judicial cuando
la demora sea atribuible y provocada a la parte imputada.

Los fundamentos relevantes de esta sentencia son:

“…debe entenderse que toda autoridad que conozca de una solicitud en la que se encuentre
involucrado el derecho a la libertad física, tiene el deber de tramitarla con la mayor celeridad
posible, o cuando menos dentro de los plazos razonables, pues de no hacerlo podría provocar
una restricción indebida del citado derecho, lo que no significa, que siempre tendrá que otorgar o
dar curso a la solicitud en forma positiva, pues esto dependerá de las circunstancias y las pruebas
que se aporten en cada caso, dado que se reitera la lesión del derecho a la libertad física, está en
la demora o dilación indebida de una solicitud de tal naturaleza, vale decir, que si la solicitud es
negada de acuerdo a una compulsa conforme a Ley no es ilegal siempre que esa negativa se la
resuelva con la celeridad que exige la solicitud.

(…)

Para resolver y compulsar si lo aseverado por la parte imputada es o no cierto y si corresponde


otorgar o no la cesación, el juez encargado del control jurisdiccional, deberá fijar la audiencia
dentro de un plazo razonable; empero, para el caso de ser imposible su realización por
cuestiones no sólo de orden formal sino que involucren posibles lesiones a derechos
fundamentales de la parte acusadora particular y del Ministerio Público, deberá asegurar que
estén notificados con el acto, y si pese a dicha notificación no se hacen presentes a la
celebración deberá desarrollarla indefectiblemente, pues la ausencia de los mismos importará su
aceptación a la solicitud, más aún si se trata del Ministerio Público, ya que éste en razón del
Principio de Unidad que le caracteriza puede asistir a la audiencia no siempre a través del Fiscal
asignado al caso sino a través de otro, si no lo hace, implica que renuncia a su derecho a objetar
la cesación, por lo mismo, el Juez deberá ser quien compulse si la parte imputada ha demostrado
con suficiente prueba que los elementos de juicio que fundaron la detención preventiva ya no
existen, pues de ser así deberá dar curso a la cesación, caso contrario deberá negarla.

Sin embargo, de lo expuesto cabe establecer que ese plazo razonable puede verse alterado no
sólo por la autoridad quien conozca de la cesación, sino por la misma parte imputada, en cuyo
caso, no se podrá alegar una dilación y menos indebida de la que sea responsable el Juez
Cautelar; así, por ejemplo, cuando la parte imputada solicite suspensiones de las audiencias no
podrá después pretender presentar un reclamo posterior y menos ante esta jurisdicción porque el
juez no la tramitó dentro del plazo razonable, sino que deberá asumir la demora que ella misma
provocó.

De igual manera, no podrá alegarse dilación indebida sobre una solicitud, cuando partiendo de la
primera la parte imputada, presente otras que se hubieren ido resolviendo, pues la demora en
esos casos se analizará a partir de la última solicitud, dado que resultaría un desacierto jurídico
computar una demora a partir de la primera, cuando ésta ha sido resuelta y posterior a ella otras,
en cuyo caso, no se puede en un razonamiento acertado, imputar una dilación al juzgador, sino
que la dilación podrá ser atribuida únicamente al juzgador cuando sin que hubieren existido
factores ajenos a sus decisiones, postergue la celebración de la audiencia y la emisión de la
resolución correspondiente”. (el subrayado es añadido).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 709


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La SC 0862/2005-R de 27 de julio, en un caso en el que constató que la razón de la demora en la


efectivización de la libertad del imputado, fue atribuible al Fiscal, por cuanto pese a la existencia
de resolución que dispuso la cesación de la detención preventiva, esta no pudo efectivizarse en
razón a que esa autoridad se rehusó remitir el informe del investigador asignado al caso de
verificación de domicilio que se le impuso como medida sustitutiva; el Tribunal Constitucional,
contrastando el problema jurídico planteado con las normas constitucionales-principios: el
derecho fundamental a la libertad personal y el principio de celeridad, otorgó la tutela, respecto
al fiscal, generando la siguiente regla procesal penal construida jurisprudencialmente:

La celeridad en la tramitación, consideración y concreción de la cesación de la detención


preventiva u otro beneficio que tenga que ver con la libertad personal no sólo le es exigible a la
autoridad judicial encargada del control jurisdiccional, sino también a todo funcionario judicial o
administrativo que intervenga o participe en dicha actuación y de quien dependa para que la
libertad concedida se haga efectiva.

Los fundamentos relevantes de esta sentencia son:

“…el tratamiento que debe darse a las solicitudes en la que se encuentre de por medio el derecho
a la libertad, entre ellas, la cesación de la detención preventiva, debe tener un trámite acelerado y
oportuno, pues de no hacerlo podría provocarse una restricción indebida de este derecho,
cuando, por un lado, exista una demora o dilación indebida en su tramitación y consideración, o
en su caso, cuando existan acciones dilatorias que entorpezcan o impidan que el beneficio
concedido pueda efectivizarse de inmediato, dando lugar a que la restricción de la libertad se
prolongue o mantenga más de lo debido. Esto en los casos, en los que por razones ajenas al
beneficiario, la cesación de la detención preventiva u otro beneficio, no puede concretarse
debido a los actos de obstaculización o dilación innecesaria, que originan que el solicitante, no
obstante de haber sido favorecido por un beneficio que le permite obtener su libertad, se ve
impedido de accederla, permaneciendo indebidamente detenido, situación por la cual se abre la
protección que brinda el hábeas corpus ante la ausencia de celeridad en efectivizarse el beneficio
otorgado.

En consecuencia, la celeridad en la tramitación, consideración y concreción de la cesación de la


detención preventiva u otro beneficio que tenga que ver con la libertad personal no sólo le es
exigible a la autoridad judicial encargada del control jurisdiccional, sino también a todo
funcionario judicial o administrativo que intervenga o participe en dicha actuación y de quien
dependa para que la libertad concedida se haga efectiva”.

“…la Jueza Segunda de Instrucción en lo Penal, en suplencia legal, por Resolución 004/2005,
dispuso la cesación de la detención preventiva de los recurrentes, bajo las siguientes medidas
sustitutivas: 1.- presentación del croquis de sus domicilios, el cual necesariamente debía ser
verificado por el Investigador asignado al caso; quien debía hacer llegar esa verificación al
despacho judicial (…).

De lo anterior se advierte, que los recurrentes no obstante de haber sido favorecidos con la
cesación de la detención preventiva, dispuesta por Resolución de 7 de enero de 2005, bajo
medidas sustitutivas, hasta la fecha de interposición del presente hábeas corpus, de 1 de febrero
de 2005, no pudieron hacer efectiva su libertad, debido a los actos dilatorios y de
obstaculización de la Fiscal recurrida, quien se rehusó a remitir el Informe de 16 de enero de
2005, presentado por el Investigador asignado al caso -de verificación de domicilio-, Informe del
que dependía el cumplimiento total de las medidas sustitutivas ordenadas por la Jueza cautelar,
con cuya actuación, la Fiscal demandada ha impedido que los recurrentes obtengan su libertad,
originando de manera indebida la prolongación de su detención, toda vez que cualquier demora
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 710
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

o dilación indebida de una solicitud que esté relacionada con el derecho a la libertad supone una
vulneración al derecho a la libertad, actuación en la que ha incurrido injustificadamente la Fiscal
recurrida al haber dilatado innecesaria e ilegalmente la concreción de la cesación de la detención
preventiva concedida a los recurrentes; por lo que, el caso demandado amerita la protección que
brinda el recurso de hábeas corpus”(las negrillas nos corresponden).

La SC 0107/2007-R de 6 de marzo, en un caso en el que constató que la razón de la demora en


la efectivización de la libertad del imputado, fue en razón a que el Juez de la causa, no obstante
haber dispuesto la cesación de la detención preventiva del imputado y dispuesto la modificación
de la fianza económica por la de fianza juratoria, consideró esperar injustificadamente, para fijar
audiencia para recibir la fianza juratoria, a que el representante del Ministerio Público sea
notificado a efectos de que pueda interponer apelación en contra del Auto de modificación de
fianza. El Tribunal Constitucional, contrastando el problema jurídico planteado con las normas
constitucionales-principios: el derecho fundamental a la libertad personal y el principio de
celeridad, otorgó la tutela, generando la siguiente regla procesal penal construida
jurisprudencialmente:

Eventual apelación de Ministerio público no puede dilatar señalamiento de audiencia, resolución


o efectivización de la medida vinculada a la libertad, por cuanto apelación tiene efecto
devolutivo o efecto no suspensivo conforme a las SSCC 660/2006-R, 236/2004-R, 1418/2005-R.

Los fundamentos relevantes de esta sentencia son:

“…la decisión que disponga, modifique o rechace las medidas cautelares, será apelable en el
efecto no suspensivo, lo que implica que la determinación adoptada debe ser ejecutada
inmediatamente, sin perjuicio de la interposición del recurso de apelación incidental previsto en
el art. 251 del CPP, que no determina la suspensión de la competencia de la autoridad judicial,
así lo estableció la SC 0660/2006-R, de 10 de julio…”.

(…)

“Los antecedentes fácticos que motivan la presente acción tutelar, permiten concluir que la
autoridad judicial recurrida si bien se pronunció negativamente respecto al pedido de audiencia
por parte de la representada de la recurrente, al hacerlo bajo el argumento de que el Ministerio
Público recién había sido notificado con el Auto de modificación de fianza, incurrió en un acto
ilegal que vulnera el derecho a la libertad de la representada de la recurrente; por cuanto, al
haber sido beneficiada con la aplicación de medidas sustitutivas como la fianza juratoria, debió
señalar inmediatamente audiencia a efectos de cumplir con las formalidades dispuestas por los
arts. 242 y 246 del CPP, teniendo en cuenta que el art. 245 del mismo cuerpo legal, establece
que la libertad sólo se hará efectiva luego de haberse otorgado la fianza; sin soslayar, que si bien
el representante del Ministerio Público recién fue notificado el 9 de enero de 2007, una eventual
apelación incidental, no tenía el mérito de suspender su competencia, por lo que debió ejecutar
inmediatamente el beneficio concedido a la imputada; advirtiéndose con dichos actos ilegales
una dilación injustificada de parte de la autoridad judicial recurrida, que no consideró que ante
una solicitud de cesación de la detención preventiva, no sólo debe imprimirse celeridad en su
trámite y consideración, sino también en su efectivización, pues de no hacerlo podría provocarse
una restricción indebida al derecho a la libertad, como ocurrió en el presente caso, que al no
haberse señalado oportunamente audiencia para el cumplimiento de las formalidades previstas
para la fianza juratoria, se incurrió en demora o dilación indebida en la efectivización de la
libertad de la imputada; situación que entorpeció e impidió que el beneficio concedido en
diciembre de 2006, se pueda materializar de inmediato, dando lugar a que la restricción de la
libertad de la representada de la recurrente se prolongue o mantenga más de lo debido; siendo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 711
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

necesario hacer constar que si bien la imputada fue puesta en libertad en mérito a la audiencia y
mandamiento de 18 de enero de 2007 -después de la presentación del recurso y antes de su
resolución-, es un aspecto que no legaliza la lesión del derecho a la libertad que ya fue
consumada, conforme se colige del art. 91.VI de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC), por
lo que corresponde declarar la procedencia de la tutela prevista por el art. 18 de la CPE, a
efectos de establecerse los daños y perjuicios ocasionados”.

Del mismo modo, el Tribunal Constitucional Transitorio, contrastó este problema jurídico con la
Constitución vigente, en algunas sentencias constitucionales, siendo la más relevante la
siguiente:

La SC 0078/2010-R de 3 de mayo, en un caso en el que constató que la demora en la que


incurrió el juez de la causa fue tanto en el señalamiento de la audiencia de cesación a la
detención preventiva, como en la tramitación de la misma debido a suspensiones injustificadas;
el Tribunal Constitucional, contrastando el problema jurídico planteado con las normas
constitucionales-principios de la Constitución vigente: el derecho fundamental a la libertad
personal, el valor dignidad, el principio de celeridad, otorgó la tutela, generando la siguientes
reglas procesales penales construidas jurisprudencialmente, a partir de la comprensión de qué
implica un acto dilatorio respecto a las solicitudes de cesación a la detención preventiva prevista
por el art. 239 del CPP, indicando:

“Bajo la égida que el derecho a la libertad ocupa un lugar importante, junto a la dignidad
humana en el catálogo de derechos civiles como parte integrante a su vez de los derechos
fundamentales, tal cual lo establece el art. 22 de la CPE al señalar que: ‟La dignidad y la libertad
de la persona son inviolables. Respetarlas y protegerlas es deber primordial del Estado‟, norma
que debe ser interpretada en base a los valores de la misma Constitución, la cual en el art. 8.II
establece que el Estado se sustenta en los valores de dignidad y libertad, entre muchos otros; se
debe tener en cuenta que la restricción o límite al derecho a la libertad física en materia penal,
con carácter provisional o cautelar, conforme a los requisitos constitucionales y legales, tienen
naturaleza instrumental y por ende modificable.

De acuerdo al sistema procesal penal vigente, plasmado en la Ley 1970 o Código de


Procedimiento Penal, el art. 239, establece los casos en que procede la cesación de la detención
preventiva, empero, el presente análisis no se aboca a los casos particulares, a ninguno de los
incisos del art. 239 del CPP, ni a los aspectos positivos o negativos, legales o doctrinales, o a su
interpretación o efectos, sino sólo y exclusivamente a aspectos generales como es la celeridad en
su trámite una vez efectuada la solicitud.

En ese sentido, es preciso puntualizar que la detención preventiva, no tiene por finalidad la
condena prematura, por cuanto la presunción de inocencia, sólo es desvirtuada ante un fallo
condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su imposición como medida precautoria está
sujeta a reglas, como también su cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no existe
una norma procesal legal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe
realizarse la audiencia de consideración, corresponde aplicar los valores y principios
constitucionales, previstos en el ya citado art. 8.II de la CPE, referido al valor libertad
complementado por el art. 180.I de la misma norma constitucional, que establece que la
jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad entre otros; motivo por
el cual toda autoridad jurisdiccional que conozca una solicitud de un detenido o privado de
libertad, debe tramitar la misma, con la mayor celeridad posible, y dentro de los plazos legales si
están fijados, y en un plazo razonable, si no está establecido por ley. De no ser así, tal actuación
procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del detenido y en consecuencia
repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por la sola privación de libertad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 712
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que necesariamente se deba deferir a su
petición, sino, se refiere a que sea escuchado oportunamente a fin de que obtenga una respuesta
positiva o negativa.

En consecuencia, se considera acto dilatorio en el trámite de la cesación de la detención


preventiva, cuando:

En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, se


dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por ley.

Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o prudencial. Plazo que puede
ser en un límite de tres o cinco días máximo, dependiendo de la particularidad de cada caso,
cuando por ejemplo existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan que ser
notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado acto previo y esencial –
como sucede con algunas notificaciones-, o que el juzgado esté de turno, etc. Con la excepción
única y exclusiva en los casos que exista complejidad por la naturaleza propia y la relevancia del
proceso, como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a la petición; situación
que deberá ser justificada por la autoridad judicial competente a momento de señalar la fecha de
audiencia, teniendo en cuenta la razonabilidad.

Se suspende la audiencia de consideración, por causas o motivos que no justifican la suspensión,


ni son causales de nulidad. Tal el caso de la inasistencia del representante del Ministerio Público
o de la víctima y/o querellante, si es que han sido notificadas legalmente y no comparecen a la
audiencia. En el caso del Ministerio Público al estar regido por el principio de unidad tiene los
medios para asistir a través de otro fiscal, y en cuanto al querellante al ser coadyuvante y estar
notificado, su participación es potestativa en dicho acto, y por ende, su inasistencia no vincula a
la autoridad jurisdiccional al estar cumplida la formalidad. No obstante, en caso de que la
suspensión se deba a la falta de notificación o a la inasistencia del propio imputado, no existe
dilación indebida ni afectación a derecho alguno, en cuyo caso deberá fijarse nueva fecha de
audiencia conforme a las directrices expuestas” (las negrillas son agregadas).

Las interpretaciones glosadas en las sentencias arriba señaladas, no contravienen el nuevo orden
constitucional, por el contrario, refrendan su contenido, en razón a que toman como parámetros
de racionalidad jurídica normas constitucionales-principios que han sido reproducidos en el
nuevo texto constitucional, como son: el derecho fundamental a la libertad personal, la dignidad
de la persona en su doble dimensión (derecho fundamental y valor supremo), los principios
procesales de celeridad procesal y respeto a los derechos fundamentales.

En cuyo mérito, las reglas procesales penales construidas jurisprudencialmente son y continúan
siendo aplicables en el razonamiento jurídico de los jueces, configurándose como novedad y
complemento de parámetro de racionalidad y razonabilidad jurídica en su labor decisoria
cotidiana otros principios que hacen al nuevo modelo de Estado Constitucional de Derecho
Plurinacional e Intercultural, como son: Los principios ético morales (art. 8.I de la CPE) y el
principio procesal de respeto a los derechos (art. 178.I de la CPE), que deben ser observados,
desarrollados y aplicados, por los jueces conforme se analizó precedentemente.

De otro lado, corresponde subrayar que las reglas procesales penales, construidas
jurisprudencialmente, glosadas anteriormente, pueden variar en alguna medida cuando se
presenten otras situaciones fácticas, empero, el razonamiento judicial, en la medida en que se
apegue a los principios constitucionales glosados, que son los que en esencia sustentan la
jurisprudencia obligatoria y vinculante de la justicia constitucional, serán válidos.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 713


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.3. La acción de libertad traslativa o de pronto despacho en la configuración de la


Constitución

La comprensión de este tipo de acción de libertad, está recogido por esta misma Sala Tercera del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en la SCP 0017/2012 de 16 de marzo, la que después de
reflexionar sobre el objeto y finalidad de la acción de libertad diseñada en el art. 125 de la CPE,
refrendó la jurisprudencia desarrollada por el Tribunal Constitucional anterior contenida en las
SSCC 1579/2004-R y 0465/2010-R, respecto a la acción de libertad traslativa o de pronto
despacho.

La SC 1579/2004-R de 1 de octubre, concluyó que el recurso de hábeas corpus -actualmente


acción de libertad- “…por violaciones a la libertad individual y/o locomoción, puede ser
reparador si ataca una lesión ya consumada, preventivo si procura impedir una lesión a
producirse o correctivo si intenta evitar que se agraven las condiciones en que se mantiene a una
persona detenida”.

En ese entendido, el Tribunal Constitucional anterior en la SC 0465/2010-R de 5 de julio, en su


Fundamento Jurídico III.3 concluyó que: “…los tipos de hábeas corpus precedentemente
aludidos, también pueden ser identificados en la nueva Ley Fundamental, e inclusive ampliados.
Así dentro de la tipología desarrollada por la jurisprudencia del Tribunal Constitucional citada
líneas precedentes, se agregó el hábeas corpus restringido, el hábeas corpus instructivo y al
hábeas corpus traslativo o de pronto despacho (SC 0044/2010-R de 20 de abril).

Conforme la doctrina constitucional sentada por este Tribunal, por medio del hábeas corpus
traslativo o de pronto despacho, se busca acelerar los trámites judiciales o administrativos
cuando existen dilaciones indebidas, para resolver la situación jurídica de la persona que se
encuentra privada de libertad” (las negrillas son añadidas).

Siguiendo con el entendimiento jurisprudencial desarrollado por la citada SC 0465/2010-R, en


su Fundamento Jurídico III.4 señaló: “Para la concreción del valor libertad, el principio
celeridad y el respeto a los derechos, se ha previsto una acción de defensa específica que
coadyuve para que los mismos no se vean afectados por actos lesivos y en caso de que así fuera,
se puedan restituir a su estado natural, en especial tratándose de derechos fundamentales…”.
En ese sentido, en el mismo Fundamento Jurídico citado en el párrafo anterior agregó a la
tipología, el hábeas corpus -ahora acción de libertad- traslativo o de pronto despacho: “…el cual
se constituye en el mecanismo procesal idóneo para operar en caso de existir vulneración a la
celeridad cuando esté relacionada a la libertad y devenga de dilaciones indebidas, que retardan o
evitan resolver la situación jurídica de la persona que se encuentra privada de libertad”(las
negrillas son nuestras)

III.4. Análisis del caso concreto

En la problemática planteada, dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público contra
el accionante, por la presunta comisión del delito de transporte de sustancias controladas, se
evidencia que la demora en fijar la audiencia y tramitar las dos solicitudes de cesación a su
detención preventiva (de 9 de diciembre de 2011 y de 1 de febrero de 2012), por las razones que
se expondrán a continuación, son atribuibles directa e indirectamente a la Jueza Primera de
Sentencia.

En efecto, como se puede advertir de la Conclusión II.1, el accionante solicitó por primera vez el
9 de diciembre de 2011 cesación a su detención preventiva al amparo de lo previsto en el art.
239.1 del CPP, habiendo sido señalada la audiencia recién para el día 19 de diciembre de 2011,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 714
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

es decir, después de 10 días. A ello se suma que la indicada audiencia fue suspendida debido a
que el acusado - ahora accionante- no asistió a la misma, en razón a que la Jueza demandada,
omitiendo su deber, no controló que la orden de salida dirigida al Centro Penitenciario de “San
Pedro”, para esa fecha fuera diligenciada oportunamente, debido a que recién se notificó a dicho
penal el 20 de diciembre de 2011, es decir, un día después del día indicado para la realización de
la audiencia. La suspensión de dicho acto procesal, motivó que se fije nuevo día para el 10 enero
de 2012, también de demorada, esto es, después de 22 días.

Desde del 10 de enero de 2012 hasta el 31 del mismo mes y año, conforme consta en la
Conclusión II.2, se fijaron las audiencias también de manera demorada, suspendiéndose las
mismas por inasistencia del acusado por causas, algunas veces atribuibles a las autoridades
policiales del recinto penitenciario. El 31 de enero de 2012, tampoco se consideró la solicitud de
cesación a la detención preventiva, pese a la asistencia del acusado a la audiencia de juicio oral
fijada en la misma fecha, en la que también se tenía que considerar el mencionado beneficio
(fs.21 y 25 a 34).

Después de las múltiples suspensiones y demoras no motivadas en la fijación de la audiencia,


conforme se evidencia de la Conclusión II.3 y pese a que el acusado reiteró por segunda vez su
petición de audiencia de cesación a la detención preventiva el 1 de febrero de 2012, esta recién
fue fijada para el 8 de febrero, es decir, después de 7 días, la que nuevamente fue suspendida en
la audiencia de juicio oral para el 14 de febrero, de la misma manera demorada y condicionando
su tramitación y resolución a la conclusión del juicio oral (fs. 40 y vta.), con el argumento que
dicha solicitud era independiente a la realización del juicio oral y que el hecho de que se hubiera
suspendido la misma era una situación diferente, que los funcionarios se olvidaron enviar la
orden de salida del acusado, solicitando, por ende, que dentro de las veinticuatro horas se
convoque a una nueva audiencia de cesación (fs. 41). Pese, a la solicitud de reconsideración, la
jueza demanda por Resolución 027/2012 de 13 de febrero, mantuvo su decisión, sosteniendo que
no existe error en lo dispuesto, por lo que se mantiene sin modificaciones el señalamiento de
audiencia, con la imposición de costas (fs. 42).

De lo aseverado por la Jueza demandada, en su informe, resumido en el apartado 1.2.2 de la


presente, contrastado con las pruebas arrimadas a este expediente de acción de libertad, se tiene
que, en términos generales, dicha autoridad justifica la demora en fijar audiencia de cesación a la
detención preventiva en:

La existencia de carga procesal traducida en audiencias fijadas para la sustanciación del juicio
oral. Este extremo no fue justificado ni demostrado en su momento al accionante en el proceso
penal, ni ahora en la presente acción de libertad, lo que deja deducir claramente que sólo es una
excusa. De otro lado, así hubiera ocurrido tal situación, existe uniforme jurisprudencia
constitucional que en forma reiterada y profusa ha manifestado que las decisiones judiciales
vinculadas a la libertada personal deben ser tramitas, resueltas y efectivizadas con la mayor
celeridad. En razón a ello, se advierte sobre este punto la inobservancia de las siguientes normas
constitucionales principios: el derecho fundamental a la libertad personal, consagrado en los
arts. 23.I de la CPE, el art. 9.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Politicos y el art.
7.1 de la Convencion Americana sobre Derechos Humanos, la dignidad de la persona, el
principio ético-moral de la sociedad plural, “ama qhilla”, previsto en el art. 8.I de la CPE y los
principios procesales de celeridad y respeto a los derechos consagrados en el art. 178.I y 180.I
de la CPE;

2) Que las suspensiones fueron atribuibles al ahora accionante, constituyendo una burla a la
administración de justicia. Esta situación carece de veracidad, conforme se evidenció de las
pruebas arrimadas a este expediente (Conclusión II.1), que demuestran que, la primera
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 715
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

suspensión fue debido a que la jueza demandada, omitiendo su deber, no controló que la orden
de salida dirigida al Centro Penitenciario, para esa fecha fuera diligenciada oportunamente,
debido a que recién se notificó a dicho penal el 20 de diciembre de 2011, es decir, un día
después del día programado para la realización de la audiencia; extremo que también evidencia
la inobservancia de las normas constitucionales principios señalados en el punto anterior, a los
que se añade, el principio ético-moral de la sociedad plural, “ama llula”, previsto en el art. 8.I de
la CPE.

De otro lado, es posible claramente advertir que la Jueza demanda, consideró que la audiencia de
cesación de detención preventiva debía considerarse a la conclusión del juicio oral, prueba de
ello el Acta de audiencia pública de juicio oral en la que afirmó que dicha audiencia se realizaría
“…a la conclusión del juicio oral…” (fs. 40 y vta.) “…y pese al recurso de reposición
interpuesto por el accionante mantuvo su decisión…”.

La exigencia de conclusión de juicio oral para recién tratar la solicitud de cesación a la


detención preventiva es constitucional y procesalmente incorrecta en razón a que, contraviene el
principio de presunción de inocencia porque asume, quebrantando el sistema de garantías, que
existe predictibilidad de que el procesado será condenado indefectiblemente a privación de
libertad y que en razón a ello, no debe disponerse su libertad ni tiene derecho a defenderse en
esa cualidad.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al conceder la acción tutelar ha actuado


correctamente.

POR TANTO

Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional en revisión resuelve:

1º APROBAR la Resolución 02/2012 de 24 de febrero, cursante de fs. 67 a 72 pronunciada por


el Tribunal Primero de Sentencia del Tribunal Departamental de justicia de Oruro, y en
consecuencia, conceder la tutela impetrada, sin disponer la libertad del accionante, únicamente
respecto a la ausencia de celeridad en la tramitación y resolución de la solicitud de cesación de
la detención preventiva, con imposición de costas.

2º Se exhorta a la jueza demandada, a que en el futuro adecue su razonamiento jurídico desde y


conforme a la Constitución.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 716


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0113/2012


Sucre, 27 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00123-2012-01-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 03/12 de 8 de febrero de 2012 cursante de fs. 193 a 195, pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Nancy Larico Magnani contra Eleo
Jhonny Mamani Trujillo, Francisco Reynaga Berrios, Alejandro Poma Achillo, Pedro Flores
Baltazar y Hernán Trujillo Supa, Gerente General y miembros de la Central Regional
Agropecuaria de Cooperativas “EL CEIBO” Ltda. de la ciudad de El Alto.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 1 de febrero de 2012, cursante de fs. 72 a 77, aclarado y adecuado el
6 del mismo mes y año a fs. 115 vta., la accionante expresa los siguientes fundamentos de hecho
y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La accionante, manifiesta que es locataria de la tienda 18 del centro comercial y Cooperativa


“EL CEIBO” Ltda., la cual viene ocupando desde el 2004, sin interrupción, con alquileres y
servicios básicos pagados al día, empero desde años atrás, es víctima de constantes atropellos
por parte de los locadores, quienes, además de hacerle firmar dos contratos de alquiler para las
gestiones 2010-2011 no le entregaron ninguno de los contratos.

Asimismo, indica que estando vigente la Resolución de Amparo Constitucional 018/2009 del
Juzgado Cuarto de Partido y de Sentencia de El Alto que ordenó a los locadores regirse a los
procedimientos legales en caso de incumplimiento del contrato de locación, e inicien las
acciones legales que correspondan; empero, luego de una serie de abusos, la cooperativa
compuesta por los demandados, citaron a la accionante a una reunión donde le hicieron firmar el
documento.

El 27 de enero de 2012, aproximadamente a horas 9:00 los demandados utilizando a María


Norma Sánchez Avilés, Notaria de Fe Pública, procedieron a allanar y desalojarle de su tienda
con violencia, echando sus enseres, mercadería, insumos y demás bienes de su propiedad, sin
exhibir mandamiento de lanzamiento, desapoderamiento u orden alguna emanada por autoridad
competente, hechos que vulneran sus derechos y garantías constitucionales.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 717


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La accionante alega vulneración de los derechos a la inviolabilidad del domicilio, al trabajo, al


comercio, al debido proceso de la defensa, derechos consagrados en los arts. 25.I, 46.I.1, 47.I y
115.I y II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, y se ordene: a) La restitución de su tienda 18 en el centro comercial


“EL CEIBO” Ltda.; b) Se proceda a la devolución de sus instrumentos y enseres de trabajo; c)
Se determine la existencia de responsabilidad civil y penal; y, d) El pago de daños, perjuicios,
honorarios profesionales, gastos y costas.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 8 de febrero del año en curso, según consta en el acta cursante
de fs. 186 a 191 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de la accionante ratificó en su integridad el memorial y su complementación y


adecuación de acción de amparo constitucional, y añadió:

El 27 de enero de 2012 la empresa “EL CEIBO” Ltda. a través de sus mandatarios, empleados y
otros, tomaron medidas de hecho contra la accionante, sacando sus instrumentos de trabajo a la
acera de la Av. Juan Pablo Segundo, arbitrariamente, desde esa fecha vivió un “vía crucis”
porque era el único sostén de su familia, así como de sus nueve trabajadores dependientes de su
pensión.

Además, manifiesta que el art. 1282 del Código Civil (CC) prohíbe la justicia por mano propia y
según el art. 710 del mismo compilado su contrato de locación se renovó tácitamente.
Reiterando su solicitud de concederle la tutela y se disponga en el fallo tres puntos: 1) Se le
restituya la tienda 18 en la cooperativa “EL CEIBO” Ltda. en el día, por constituir su fuente de
trabajo; 2) La devolución de sus instrumentos de trabajo; y, 3) Finalmente, se condene a la
cooperativa al pago de los daños y perjuicios por la suma de Bs60 000.- (Sensenta Mil
Bolivianos), además las costas procesales, con la protesta de hacer llegar la iguala profesional.

En uso del derecho a la réplica, el abogado de la accionante manifestó que el informe de los
demandados debería ser respecto a la existencia del mandamiento de lanzamiento emitido por el
Juez.
Asimismo, respecto a la subsidiariedad, indicó que la accionante interpuso un interdicto de
recobrar la posesión, pero dicha demanda fue retirada.

I.2.2. Informe de las personas demandadas

El demandado Eleo Jhonny Mamani Trujillo, Gerente General del centro comercial “EL
CEIBO” Ltda. a través de su abogado, manifestó en audiencia: i) Que la accionante ejercitó el
proceso de interdicto de recuperar la posesión; ii) Se evidenció en el cuaderno de garantías
constitucionales que no existe el registro de comercio de la actividad de la accionante; iii) No
existen facturas que demuestren sus ganancias de Bs3 000 (tres mil bolivianos); iv) Tampoco se
hallan contratos de trabajo de las personas que supuestamente serían sus trabajadores; y, v) Que
la accionante trata de subsanar con la presente acción, el trámite que inicialmente realizo, es
decir la presentación del interdicto de recobrar la posesión, ofreciendo como prueba las fechas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 718


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

de ingreso de la acción y el proceso, solicitando el rechazo in limine de la pretensión solicitada


por la accionante (fs. 188 vta. a 190).

Por su parte, Hernán Trujillo Supa, administrador del centro comercial “EL CEIBO” Ltda.,
ahora demandado, a través de su abogado, indicó en audiencia: a) La accionante es arrendataria
desde el 2004 y tiene varios contratos, el último fue firmado, con fecha de inicio y conclusión
hasta el 31 de marzo de 2011; b) Conforme las cartas notariadas de años atrás, se estableció que
la accionante adeudaba varias sumas de dinero, así como del extracto del sistema administrativo
de la empresa donde también se evidenció que era deudora morosa; c) De la misma forma,
manifestó que en la fábrica “EL CEIBO” se producen alimentos, chocolates que constantemente
pasan por inspecciones de salubridad, aspectos que indujeron, a través de asambleas de
directorio, tomar la determinación que en el centro comercial dejen de alquilar los ambientes
para el expendio de comidas, extremo que fue comunicado a la accionante mediante cartas
notariadas; y, d) Por otro lado, indica que se planteó varias alternativas a la accionante, firmando
un acta de conciliación donde se comprometió a devolver los ambientes el 20 de diciembre (no
cita el año) impostergablemente, documento que fue reconocido en sus firmas por autoridad
competente, solicitando el rechazo de la acción planteada (fs. 189 a 190).

Haciendo uso de su derecho a la dúplica, expresó que el art. 607 (no cita norma legal) indica
cuál es el proceso que deben seguir; además, que los bienes fueron entregados a la accionante y
su esposo, siendo decisión de ellos no haberlos recogido (fs. 190 vta.).

Por otra parte, los demandados Francisco Reynaga Berrios, Presidente; Alejandro Poma Achilo,
Vicepresidente y Pedro Flores Baltazar, Tesorero; todos, del Consejo de Administración, en
calidad de representantes legales de la Central Regional Agropecuaria Industrial de Cooperativas
“EL CEIBO” Ltda., no asistieron y tampoco presentaron informe escrito.

I.2.3. Resolución

La Jueza Cuarta de Partido Liquidador y de Sentencia de El Alto del Distrito Judicial del
departamento de La Paz, constituida en Juez de garantías, pronunció Resolución 03/12 de 8 de
febrero de 2012, cursante de fs. 193 a 195, concediendo la tutela interpuesta por la accionante,
disponiendo la restitución de la tienda 18 del centro comercial “EL CEIBO” Ltda. ubicada en la
av. Juan Pablo Segundo, concediendo el término de tres días a partir de su notificación, sin
costas por ser excusable.

La Resolución dictada se basa en los siguientes fundamentos: 1) Con relación al principio de


subsidiariedad de la acción el art. 76 de la ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP)
establece que la acción de amparo constitucional no procederá cuando exista otro medio legal o
recurso para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidas, habiéndose sin
embargo, establecido una excepción a la regla de subsidiariedad por el principio de inmediatez,
la cuál se da cuando la restricción o supresión de los derechos y garantías constitucionales
denunciados, ocasionen perjuicio irremediable e irreparable, en cuya situación de manera
excepcional procede la tutela demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos
pendientes. La interposición de un proceso de interdicto de recobrar la posesión no impide la
consideración de la presente acción, máxime si se la retiró la acción, no siendo evidente que
estuviere en trámite; 2) La accionante ha tenido la calidad de inquilina de “EL CEIBO” Ltda.
conforme se tiene de los contratos de arrendamiento, recibos de alquiler a momento del hecho,
que no corresponden en el presente caso, sino el de determinar si existe la vulneración de los
derechos denunciados por la denunciante; respecto al cumplimiento del convenio de las partes
correspondiendo a la vía ordinaria su tramitación; 3) La accionante señaló que fue desalojada
arbitrariamente, sin que hubiere mandamiento de desapoderamiento u otra orden judicial,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 719
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

restringiéndole su derecho al debido proceso, respecto al derecho a la defensa previsto en el art.


115 de la CPE, relacionado con el art. 1282 del CC, estableciendo que el art. 635 del Código de
Procedimiento Civil (CPC) dispone el procedimiento para el lanzamiento; 4) Respecto a la
inviolabilidad del domicilio previsto por el art. 25 de la CPE, no se demostró que la tienda 18 de
las instalaciones de “EL CEIBO” hubiere constituido el domicilio de la accionante, de acuerdo a
lo previsto por el art. 24 del CC, no habiéndose demostrado la vulneración de dicha garantía.
Tampoco se evidenció la privación del derecho al trabajo teniendo en cuenta los arts. 46 y 47.I
de la CPE, empero de los hechos emergentes se le ha impedido continuar con el desarrollo de la
actividad que realizaba; y, 5) No se acreditó que los instrumentos de trabajo de la accionante,
hubieren sido despojados o estuvieren en poder de los demandados, tampoco se demostró de
manera objetiva la pérdida económica que tuviere la accionante, aspecto que le impidió disponer
una responsabilidad civil y penal.

En la vía de complementación, al dictar la Resolución 03/12 de 8 de febrero de 2012, los


demandados mediante sus abogados manifestaron que por la necesidad de la empresa ingresaron
al ambiente y no existen paredes ni techo y no tienen otro ambiente porque las demás están
alquilados, siendo de necesidad institucional y empresarial, abrir un garaje por los problemas
acontecidos, por lo que es imposible cumplir con la restitución en tres días.
Asimismo, en la vía de complementación, la accionante mediante su abogado indicó que se
aclare o enmiende sobre las costas procesales, reservándose cualquier acción al incumplimiento
de la resolución.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. La accionante tiene suscrito tres contratos de arrendamiento con el administrador del centro
comercial “EL CEIBO” Ltda. de la tienda 18 ubicada en la av. Juan Pablo Segundo 2560 de la
ciudad de El Alto (fs. 19 a 24 y de 125 a 127).

II.2. Asimismo, cursa en obrados, Formulario Único de Recaudaciones del Gobierno Municipal
de El Alto, sobre la actividad y razón social de pensión familiar, comprobantes de pago y
recibos de alquiler a nombre de la accionante; el primero por el mes de enero del año en curso, y
el segundo y tercero por los meses de noviembre y diciembre, ambos de 2011 por concepto de
pago de alquiler y servicios (fs. 2 y de fs. 113 a 114).

II.3. Mediante duplicado de copia del acta de verificación de desocupación de la tienda 18 del
edificio “EL CEIBO” ubicado en la av. Juan Pablo Segundo de 27 de enero de 2012, a cargo de
Omar Ramiro Monasterios Alarcón, Notario de Fe Pública de Primera Clase, se constata que los
muebles del local estaban en vía pública (fs. 29).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante alega que se vulneraron sus derechos a la inviolabilidad del domicilio, derecho al
trabajo, derecho al comercio, al debido proceso a la defensa, por cuanto los demandados
ejercieron acciones de hecho al ingresar a su tienda e incluso a su depósito, sustraendo sus
pertenencias y sacarlas a la vía pública, desalojándole con violencia de la tienda 18 del centro
comercial “EL CEIBO” sin ninguna orden judicial; además que, a raíz de la sustracción de sus
enseres, no pudo ejercer su derecho al trabajo, como tampoco pueden hacerlo sus trabajadores,
paralizando su negocio y estando impedida de comercializar su mercadería, ocasionándole
grandes perjuicios económicos.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 720
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de


conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. Del desalojo extrajudicial de un inquilino de local comercial por el propietario

En problemáticas similares, en los que inquilinos de locales comerciales demandaron medidas


de hecho cometidas por los propietarios, el Tribunal Constitucional, indicó que ante una actitud
de hecho del propietario de un inmueble frente a su arrendatario, se otorga la tutela al agraviado.
Así, la SC 0309/2002-R de 20 de marzo, señala: “…se determina inobjetablemente que una
persona aún a efectos de hacer valer su derecho a la propiedad, no tiene potestad alguna para
recuperar por mano propia y mediante actos de hecho su bien, menos aún cuando por voluntad
propia le otorgó a un tercero”.

De igual forma, la SC 1399/2002-R de 18 de noviembre, indicó: “…que en casos de contrato de


arrendamiento, si bien existen vías judiciales para que las partes del contrato hagan valer sus
derechos, esta jurisdicción no puede sustraerse a la concesión de la tutela, dado el plano de
desigualdad en que se encuentra el arrendatario frente al arrendador propietario, además de
los derechos que involucra el contrato, pues por una parte el inmueble puede que esté destinado
a ser residencia, o por otra a ser utilizado como el lugar del trabajo, lo cuál claramente deja
entrever que dicho contrato lleva implícitos derechos fundamentales…”.

Para el caso de que la accionante hubiera incumplido con las cláusulas del contrato, los
demandados debieron acudir al órgano jurisdiccional y no proceder con medidas de hecho
pretendiendo el desalojo, extremo que dentro nuestro ordenamiento jurídico no esta permitido al
arrendador o propietario.

III.2. Las vías de hecho y la acción de amparo constitucional

Uno de los principios que informa la acción de amparo constitucional es el de subsidiariedad


previsto en el art. 129.I de la CPE, cuando señala que procede: “…siempre que no exista otro
medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos y amenazados”.

Regla que tiene su excepción, en los casos de vías o medidas de hecho, en los que por la
inminencia del daño irreparable e irrevocable que amenace o lesione derechos fundamentales o
garantías constitucionales, se activa directamente la protección mediante la acción de amparo
constitucional.

La SC 0864/2003-R de 25 de junio, señala que se: “…ha instituido una excepción a la regla de
la subsidiariedad, estableciendo la procedencia del amparo para evitar un daño o perjuicio
irremediable, lo que supone que de no otorgarse la tutela al derecho o garantía constitucional
vulnerados hay inminencia de un mal irreversible, injustificado y grave, que coloque al
recurrente en un estado de necesidad, que justifica la urgencia de la acción jurisdiccional, ya
que de continuar las circunstancias de hecho en que se encuentra el recurrente, es inminente e
inevitable la destrucción de un bien jurídicamente protegido, lo que exige una acción urgente
para otorgar inmediata e impostergable por parte del Estado en forma directa”.

Además, la SC 0148/2010-R de 17 de mayo, indicó: “…existen requisitos para considerar la


situación como medida de hecho y hacer abstracción de las exigencias procesales, como ser: 1)
Debe existir una debida fundamentación y acreditación objetiva de que efectivamente se está
frente a una medida de hecho o de justicia a mano propia, donde el agraviado se encuentre ante
una situación de desprotección o desventaja frente al demandado, o agresor, sea autoridad,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 721
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

funcionario o particular o grupo de personas, por la desproporcionalidad de los medios o


acción; la presentación de la acción de amparo constitucional debe ser de manera oportuna e
inmediata, haciendo abstracción de la subsidiariedad. De lo contario no justificaría la premura
ni gravedad y deberá agotar las instancias jurisdiccionales o administrativas pertinentes según
sea el caso, y agotadas las mismas, acudir a la justicia constitucional. 2) Necesariamente se
debe estar ante un inminente daño irreversible o irreparable, ya sea agravando la lesión ya
consumada, o que ello provoque la amenaza de restricción o supresión a otros derechos
fundamentales. Situaciones que deben ser fundamentadas y acreditadas. 3) El o los derechos
cuya tutela se pide, deben estar acreditados en su titularidad; es decir, no se puede invocar
derechos controvertidos o que estén en disputa, atendiendo claro está, a la naturaleza de los
mismos. 4) En los casos en que a través de medios objetivos se ponga en evidencia que existió
consentimiento de los actos denunciados y acusados como medidas de hecho, no corresponde
ingresar al análisis de la problemática, por cuanto esta acción de defensa no puede estar a
merced del cambio o volatilidad de los intereses del accionante. Sin embargo, cuando el
agraviado o accionante señale que existen actos de aparente aceptación, pero que son producto
de la presión o violencia que vició su voluntad, ésta situación debe ser fundamentada y
acreditada de manera objetiva, en ese caso, será considerada una prueba de la presión o
medida de hecho, inclusive”.

La jurisprudencia constitucional se ha pronunciado al respecto en la SC 0520/2011-R de 25 de


abril al indicar: “Cuando se denuncian, como en este caso, acciones que implican una
pretendida reivindicación de prerrogativas, utilizando la fuerza en las cosas aprovechando su
poder por ser titulares o poseedores, o ejerciendo coacción sobre personas, ostentando calidad
de propietarios, empleando violencia, alegar o reivindicar aparente o efectivo mejor derecho, al
margen de las acciones y mecanismos establecidos por la Constitución Política del Estado y las
leyes; es decir, actuando por sí mismos, sin recurrir al ordenamiento legal, el Tribunal
Constitucional, determinó que tales actos son acciones o vías de hecho, que no tienen
justificación de ninguna índole, menos legal; la sola circunstancia de pertenecer a un colectivo
social, supone la observancia de exigir derechos, previo el cumplimiento de obligaciones, en el
marco del estricto respeto de la dignidad e igualdad, que es la base de la convivencia pacífica
entre semejantes y el principio sustancial que informa al derecho, como conjunto de normas que
regulan las relaciones recíprocas, así como de los individuos con el Estado y viceversa,
situación que proscribe toda posibilidad de tomar por mano propia una aparente justicia que
definitivamente no lo es, desde el momento mismo que se la activa por sí y para sí; tomando las
cosas desde un ángulo o punto de vista, que interesa sólo a uno, sin tomar en cuenta al otro, que
es la parte esencial de la bilateralidad del derecho, porque terminantemente es imposible vivir
sin convivir, siendo un imperativo -cuando no se vislumbra una solución pactada- someter
nuestras controversias, al imperio de la ley y en su caso a los tribunales establecidos por ella”.

III.3. Respecto a las costas procesales, del daño emergente y el lucro cesante

Se evidencia que por memorial de aclaración enmienda y complementación, la accionante


solicita que el Tribunal de garantías, aclare y enmiende la Resolución 03/12; cursante de fs. 193 a
195, que concedió la tutela “sin costas” por ser excusable. Adjuntando al respecto la accionante, la
iguala profesional suscrita con el abogado que la representó por el monto de Bs20 000.- (veinte mil
bolivianos). Arguyendo la existencia de lucro cesante y daño emergente en un valor de Bs60 000.-
(sesenta mil bolivianos), sin adjuntar ninguna prueba que respalde dicha pretensión.

Se entiende que una lesión denunciada y demostrada, siempre ocasionará una pérdida
patrimonial y otros gastos, los cuales deben ser demandados expresamente por la parte
accionante. En este entendido, sólo deberá someter la demanda de calificación de daños y
perjuicios a los siguientes criterios: i) la pérdida o disminución patrimonial que haya sufrido la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 722
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

parte damnificada como consecuencia del acto ilegal cometido en su contra, y ii) los gastos que
la parte recurrente ha tenido que efectuar para lograr la reposición del derecho conculcado, pues
así lo ha asumido el Tribunal Constitucional en firme y uniforme línea jurisprudencial, que fue
desarrollada en el AC 011/2004-CDP de 2 abril al señalar: “a) La pérdida o disminución
patrimonial que haya sufrido la parte damnificada a consecuencia del acto ilegal cometido en
su contra; y, b) Los gastos que los recurrentes han tenido que efectuar para lograr la reposición
del derecho conculcado”.

El primer criterio responde al efecto inmediato que podría emerger de la lesión constatada del
derecho fundamental o garantía constitucional, es decir, aquel efecto material directo que se
constata y percibe sin necesidad de un proceso controversial; ello significa que en la
sustanciación de la acción amparo constitucional, el daño civil no puede ser determinado o
calificado sobre la base de los parámetros previstos por el art. 994 del CC, es decir, el daño
emergente y el lucro cesante, pues la determinación de un resarcimiento de daños y perjuicios
con dichos criterios requiere de un proceso controversial en el que las partes, en igualdad de
condiciones, puedan hacer valer sus pretensiones; hecho que no es posible realizar con la acción
de amparo constitucional, primero, porque su finalidad es la de otorgar una tutela inmediata,
efectiva e idónea, restableciendo o restituyendo el derecho restringido o suprimido, y no el
resarcimiento de los daños civiles; y, segundo, porque dado su carácter sumarísimo no es
posible desarrollar un verdadero proceso contencioso o controversial.

En consecuencia, el accionante que considere haber sufrido daños y perjuicios que requieren ser
reparados, previa calificación sobre la base de los criterios del daño emergente y lucro cesante,
tendrá la vía “civil ordinaria", razonamiento que también fue referido en el AC 0042/2004-CDP
de 29 de octubre de 2004.

Por tanto, y conforme a la jurisprudencia emitida, tanto el daño emergente, como el lucro
cesante, deben ser dilucidados en la vía ordinaria. Corresponderá pues, por lo expuesto, dilucidar
cuál es el significado de daño emergente y lucro cesante: a) Daño emergente (pág. 6 Tom. III,
D-E), según señala Cabanellas (1994), es la pérdida sobrevenida al acreedor por culpa u obra del
deudor, al no cumplir la obligación, se traduce en la disminución del patrimonio; y b) Lucro
cesante es (pág. 232 Tom. V, J-O), la ganancia o beneficio que se ha dejado de obtener por obra
de otro, perjudicial para los propios intereses”.

En tal sentido, los accionantes dentro de las acciones tutelares, efectúan gastos para llevar
adelante las mismas; debiendo ser estos resarcidos, empero únicamente respecto a lo que
corresponde dentro de los gastos admisibles, conforme a la doctrina y jurisprudencia
constitucional.

En el presente caso, si la accionante cree haber sido afectada en mayores daños y perjuicios,
puede recurrir a la vía legal correspondiente, pues no es función de este Tribunal Constitucional
Plurinacional, el hacer valer pretensiones que tergiversen el espíritu de la acción de amparo
constitucional, tal cual es el de restablecer el o los derechos y garantías vulnerados.

Respecto a los honorarios profesionales, en acciones constitucionales, los mismos deben ser
considerados, conforme al arancel mínimo del Colegio de Abogados del departamento o ciudad
en el que se encuentra suscrito el abogado patrocinante, o en su caso, tomar dicho arancel como
base. “No” pudiendo pretenderse que dentro las acciones tutelares, la parte perdidosa pague
supuestas igualas profesionales, cuyo monto sea superior al arancel señalado, toda vez que dicho
aspecto desvirtuaría la naturaleza de la acción de amparo constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 723


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por otra parte, el art. 79.5 de la LTCP, señala que dentro el contenido y forma de la resolución,
ésta contendrá entre otros: “La imposición de costas y multa si corresponde”. Y toda vez que en
la presente acción fue solicitada la misma de manera expresa y reiterada, es pertinente atender
dicha solicitud.

III.4. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el caso analizado, se presentan los supuestos de activación directa de la acción de amparo


constitucional por vías de hecho. Conforme la jurisprudencia contenida en la SC 0971/2010-R
de 17 de agosto, el primer requisito referido a la presentación de la acción de amparo
constitucional debe ser oportuna e inmediata, evidenciándose que el acto de desalojo del
ambiente dado en contrato de alquiler por los demandados se produjo el 27 de enero de 2012 y
la demanda fue presentada el 1 de febrero del mismo año. Respecto al segundo requisito, se
demostró que existe un inminente daño irreparable que puede considerarse en detrimento de la
accionante, toda vez se le impidió continuar con el desarrollo de su actividad comercial. En
cuanto al tercer requisito, se acreditó el derecho de la inquilina a realizar su actividad en función
del contrato de arrendamiento de una tienda suscrito con los demandados. Finalmente, el cuarto
requisito, no se dio el consentimiento de los actos denunciados y acusados como medidas de
hecho.

Consiguientemente, la titularidad sobre un bien inmueble no le otorga al propietario o


representante de los titulares a hacer justicia por mano propia, pues en el caso de
incumplimiento de contrato de alquiler respecto al plazo de su duración, los demandados tenían
la vía ordinaria para conseguir el desalojo de la inquilina.

Evidenciándose que los demandados incurrieron en acciones de hecho, en perjuicio de la


accionante, resultando viable la tutela impetrada por las medidas de hecho ejercidas, con la
subsiguiente lesión al derecho del debido proceso y consiguientemente, también respecto a los
derechos a la defensa y al trabajo, al haber sido desalojada violentamente y en forma arbitraria
perjudicando la continuidad de la actividad que realizaba la accionante.

De manera reiterada, se señala respecto a las costas procesales; que las mismas deben
comprender: a) Honorarios profesionales conforme arancel del Colegio de Abogados o tomando
como base esta; y b) Gastos efectuados en el trámite de la acción de amparo constitucional, es
decir timbres, valorados, etc.; aspectos que deberán ser evaluados en ejecución de Sentencia por
la Jueza de garantías constitucionales.

En consecuencia la Jueza de garantías, al conceder la acción tutelar, ha actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 03/12 de 8
de febrero de 2012 pronunciada por la Jueza Cuarta de Partido, Liquidador y de Sentencia de El
Alto del departamento de La Paz; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, con
costas.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra.Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr. Efren Choque Capuma.-Magistrado.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 724
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

AUTOS CONSTITUCIONALES EMITIDOS POR LAS


SALAS: ESPECIALIZADA PRIMERA, SEGUNDA,
TECERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 725


726
Autos de Enmienda, Complementación y Ampliación

(ECA)

727
728
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_____________ ENMIENDA, COMPLEMENTACION Y AMPLIACION

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

AUTO CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0003/2012-ECA


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00060-2012-01-AL
Departamento: Chuquisaca

En la solicitud de enmienda y complementación presentada por Enrique Rodríguez Ledesma


dentro de la acción de libertad que siguió contra Héctor Llave Poquechoque, Fiscal de
Materia, respecto a la SCP 0016/2012 de 16 de marzo.

I. DE LA COMPLEMENTACIÓN

I.1. Síntesis del Memorial

Mediante memorial presentado el 2 de abril de 2011, se apersona Enrique Rodríguez Ledesma,


solicitando la enmienda y complementación de la SCP 0016/2012 de 16 de marzo; señalando
que al presente caso, no se debió haber aplicado la subsidiariedad; indicando que de la prueba
adjuntada, existió memorial formulando incidente ante la Juez Tercero de Instrucción en lo
Penal; conminando al Fiscal del caso, informe respecto del mandamiento de aprehensión cursada
contra él.

I.2. Plazo de presentación de Enmienda, Complementación y Aclaración

Una vez que el accionante fue notificado con la SCP 0016/2012 de 16 de marzo, el 30 de marzo
de 2012 a horas 17:00; éste presentó el memorial de solicitud de enmienda y complementación
el 2 de abril del mismo año a horas 16:55, por lo que la solicitud fue interpuesta dentro de plazo
legal.

II. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DE LA RESOLUCIÓN

El art. 45 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, establece que este Tribunal: “…de
oficio o a petición de parte, dentro de las veinticuatro horas siguientes a la notificación de la
resolución, podrá aclarar, enmendar o complementar algún concepto obscuro, corregir un error
material o subsanar alguna omisión sin afectar el fondo de la resolución. La resolución será
emitida mediante Auto Constitucional en el plazo de veinticuatro horas desde que asuma
conocimiento”. Es decir, es posible que la parte pueda solicitar la complementación y enmienda
de ciertos aspectos que a su criterio fueron omitidos, solicitando que se complemente o subsane
esa situación no advertida por el Tribunal Constitucional Plurinacional al momento de emitir la
respectiva Sentencia Constitucional Plurinacional.

En el presente caso, la SCP 0016/2012; revocó la Resolución dictada por el Tribunal de


garantías, denegando la tutela por su improcedencia en razón de la subsidiariedad de la acción
de libertad; indicándose en dicho fallo: “No debiendo recurrir en forma directa a la vía

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 729


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_____________ ENMIENDA, COMPLEMENTACION Y AMPLIACION

constitucional, la que es viable únicamente en situaciones en las que, impugnadas las supuestas
ilegalidades, las mismas no sean reparadas por el juez ordinario”.

Hecho el cual se encuentra completamente claro, más aún, habiéndose desarrollado en las líneas
jurisprudenciales y de análisis pertinentes para la conclusión del fallo en el punto III de la
referida Sentencia; por lo que no corresponde la enmienda ni complementación. Siendo la Juez
Tercero de Instrucción en lo Penal, la encargada de ejercer el control jurisdiccional; quien debe
pronunciarse sobre los incidentes del proceso, y en su caso, hacer cumplir sus resoluciones; no
pudiendo acudir el accionante ante la jurisdicción constitucional de manera directa.

POR TANTO
-
El Tribunal Constitucional Plurinacional en virtud de la jurisdicción y competencia que le
confieren los arts. 127 de la Constitución Política del Estado y 45 de la LTCP; resuelve: NO
HABER LUGAR a la complementación y enmienda solicitada.
Regístrese y notifíquese.

Fdo. Dra. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Dr.Efren Choque Capuma.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 730


RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS
POR LA SALA LIQUIDADORA

731
732
CONTROL DE
CONSTITUCIONALIDAD
TUTELAR

733
734
Sentencias Constitucionales Pronunciadas en Revisión de
Acciones de Defensa

735
736
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0053/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20165-41-AAC
Departamento: La Paz

En revisión a la Resolución 668/2011 de 25 de agosto de 2011, cursante de fs. 266, a 269 de


obrados, pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Irma
Bernalda Ralde Vda. de Montaño contra Carolina Enny Terrazas Siles, Jueza Séptima de
Instrucción en lo Civil; Javier Loayza Antelo, Juez Cuarto de Partido en suplencia legal de
Consuelo Chacon Shmilt de Méndez, Jueza Tercera de Partido, ambos en lo Civil y
Comercial del mismo Distrito Judicial, y Waldo Leonel Calla Gutiérrez, Gerente General
a.i. de la Corporación del Seguro Social Militar (COSSMIL).

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

A través del memorial presentado el 10 de julio de 2009, cursante de fs. 156 a 168 y el
modificatorio de 18 de agosto de 2011, corriente de fs. 188 a 189 vta., la accionante refirió que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Habiendo COSSMIL, el 13 de septiembre de 2002, registrado a la menor Camile Vanessa


"Montaño" Urquizo, hija de Wilma Rosario Urquizu Blasquez, como si fuese hija de su esposo
Ernesto Montaño Araoz, fallecido el 13 de agosto del citado año, afectando sus derechos y los
de sus hijos, ya que dispuso se mantenga fondos en custodia, respecto a la parte de los
beneficios económicos que supuestamente "correspondería" a la mencionada menor; sin
embargo, de manera extraña se habría procedido a disponer ante las oficinas de la mencionada
Corporación, levantar los fondos en custodia, mediante Resoluciones 1458 de 24 de abril de
2007 y 261/06 de 16 de agosto, de 2006.

Señaló además que, fue declarada heredera mediante Resolución 681/2002, dictada por el Juez
Octavo de Instrucción en lo Civil y que en ejercicio de sus derechos sucesorios se enteró de la
irregular inscripción realizada en COSSMIL, ante lo cual el 2 de septiembre de 2008, presentó al
Juzgado de turno, solicitud de orden judicial para que COSSMIL extienda copias legalizadas e
informe sobre el ilegal registro de la menor después del fallecimiento de su esposo, por lo que el
Juzgado Séptimo de Instrucción en lo Civil, procedió a emitir el 3 de septiembre de ese año,
orden judicial que dispuso se franquee la certificación solicitada y las fotocopias legalizadas;
empero, la institución no cumplió con la misma, razón que motivó solicite al Juzgado que emitió
la referida orden, se conmine a COSSMIL; petición que no fue resuelta por dicho Juzgado, sino
en apelación mediante Auto de Vista 382/08 de 21 de noviembre, disponiendo que el Juzgado de
origen emita la correspondiente conminatoria de ley de 2008.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 737


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Agrega que la referida Corporación fue notificada con la conminatoria el 28 de enero de 2009,
teniendo setenta y dos horas para cumplir con la orden judicial, pero, ante un nuevo
incumplimiento de las autoridades de dicha institución, la accionante el 4 de febrero de ese año,
presentó memorial solicitando a la Jueza, imposición de sanción pecuniaria, conforme lo
dispuesto en el Auto de Vista de 23 de diciembre de 2008; en ese sentido, la Jueza dispuso que
el Gerente de COSSMIL, informe sobre el cumplimiento de dicha orden judicial, bajo
conminatoria de aplicarse la multa progresiva prevista en el art. 184 del Código de
Procedimiento Civil (CPC); ante lo cual COSSMIL, el 9 del mismo mes y año, presentó un
memorial de "supuesto informe de cumplimiento de orden judicial" (sic)., respecto al cual, la
Jueza ahora demandada, de manera ilegal e indebida resolvió dar por concluida la solicitud de
orden judicial, así como la competencia del Juzgado respecto a la misma, aludiendo la
tramitación de otras órdenes judiciales que habría realizado, vulnerando sus derechos, pues no se
consideró que la solicitud se trataba de una distinta a las anteriores, motivo por el cual, el 10 del
indicado mes y año, presentó recurso de reposición con alternativa de apelación, que fue resuelto
mediante Resolución 0195/09 de 29 de abril, por la Jueza Tercera de Partido en lo Civil y
Comercial, confirmando el ilegal Auto de Vista de 23 de marzo de 2009, vulnerando sus
derechos, tratando el trámite como orden instruida y no como orden judicial, dejando en
incertidumbre los agravios que fueron expuestos en el recurso de alzada, circunstancia por la que
presenta esta acción tutelar, modificándola posteriormente contra Javier Loayza Antelo, Juez
Cuarto de Partido en lo Civil y Comercial en suplencia legal de su similar Tercero, y contra
Waldo Leonel Calla, Gerente General de COSSMIL, debido a que las anteriores autoridades
cesaron en sus funciones.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante estima como vulnerados sus derechos a "la seguridad jurídica", a la petición y al
debido proceso, citando al efecto los arts. 24, 115, 117.I y 120.I de la Constitución Política del
Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela y se ordene: a) Cumplir con la orden judicial de 3 de septiembre de


2008; b) Dejar sin efecto la disposición judicial de 23 de marzo de 2009, que da por concluida la
competencia del juzgado para la orden judicial, así como la Resolución 195/09; c) Disponer la
imposición y cumplimiento de la multa compulsiva y progresiva a COSSMIL; d) Se resuelva el
recurso de reposición con alternativa de apelación, presentado el 10 de febrero de 2009, por Inés
Nolberta Castro Alvarado, que fue contestado por la ahora accionante; e) Se establezca
responsabilidad civil con monto indemnizable a su favor, por las omisiones indebidas de las
autoridades "recurridas"; y f) El pago de costas judiciales a favor de la accionante.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 25 de agosto de 2011, según consta en el acta cursante de fs.
262 a 265 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción.

La accionante, mediante su abogado, ratificó su acción, aclarando que la misma no se halla


dirigida contra Javier Loayza Antelo, Juez Cuarto de Partido en lo Civil y Comercial del Distrito
Judicial de La Paz.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 738
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Javier Loayza Antelo, Juez Cuarto de Partido en lo Civil y Comercial, mediante informe escrito
cursante a fs. 218 y vta. de obrados, leído en audiencia, expresó que: 1) Posterior a todo el
trámite de la orden judicial, donde se emitieron, entre otros, el Auto de Vista 382/2008 y el
decreto de 3 de octubre del mismo año, la accionante solicitó la extensión de nuevas fotocopias
al Juzgado Séptimo de Instrucción en lo Civil, Juzgado que dispuso se acuda ante el juzgado de
turno, argumentando que la primera orden ya fue cumplida, decisión confirmada por Auto de
Vista emitido por la Jueza Tercero de Partido en lo Civil; y 2) Hace notar que desde siete meses
antes de emitir el informe indicado, viene supliendo a la Jueza Tercera de Partido en lo Civil,
Consuelo Chacón Shmilt de Méndez, lo cual evidencia que no ha tenido participación en los
actos procesales objeto del "recurso", por lo que solicita se le declare excusable por ser Juez
suplente.

La co demandada Carolina Enny Terrazas Siles, Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil,


mediante informe escrito cursante de fs. 219 a 223 de obrados, expresó lo siguiente: i) De
acuerdo al art. 178 de la CPE, la "seguridad Jurídica" es un principio no tutelado por la acción
de amparo constitucional, que sólo tutela derechos constitucionales, argumento que respalda lo
fundamentado con la SC 1925/2010-R de 25 de octubre; ii) El derecho a la petición se considera
lesionado cuando no se obtiene respuesta positiva o negativa, en el caso referido en la acción,
COSSMIL ha procedido a la entrega de la documentación solicitada por la accionante por ende
no se ha vulnerado derecho alguno, tal como lo aclaran las SSCC 1995/2010-R, 0981/2001-R y
0776/2002-R, cuyas partes pertinentes mencionó la demandada; iii) La orden judicial es emitida
fuera de proceso y a petición unilateral, no existe contra parte y no constituye un proceso, pues
sólo viabiliza el derecho a petición previsto en el art. 24 de la CPE, sobre el caso, COSSMIL ha
acreditado haber cumplido con la entrega de los documentos solicitados por la accionante,
además si esa documentación está o no a satisfacción de la accionante, es un asunto que no
puede aclararse en la solicitud de orden judicial, porque no se dirimen derechos, por ende el
núcleo esencial del derecho a petición, cual es obtener una respuesta positiva o negativa ha sido
cumplido; iv) La accionante pretende que el Tribunal de garantías se constituya en juzgado
"casacional" que revise el fondo de la decisión judicial adoptada mediante Auto de 23 de marzo
de 2011, ratificado por Resolución de fs. 146, extremo que desnaturaliza la función de ese
Tribunal y que es contrario al contenido de las SS CC 1013/2010-R, 1000/2010-R de 23 y
0247/2007, cuyo texto pertinente fue citado; v) El petitorio de la accionante resulta
contradictorio y excluyente entre sí, pues, entre otros, solicita que se ordene la extensión de la
certificación solicitada y después que se deje sin efecto el Auto de 23 de marzo de 2009 y se
cumpla con la multa impuesta, lo cual implica que si se concede la tutela, COSSMIL debe
cumplir con la orden y en ese supuesto no procedería la multa exigida; y, vi) En la solicitud de
responsabilidad civil no se explica cuál el nexo causal del daño y su magnitud, sobre daños que
hubiese sufrido la accionante como consecuencia directa de los hechos invocados en su acción.
En ese sentido solicita que se deniegue la acción.

Waldo Leonel Calla, Gerente General de COSSMIL, mediante memorial de informe escrito
cursante de fs. 224 a 225 de obrados, leído y ratificado en audiencia, expresó lo siguiente: a)
COSSMIL cumplió la orden judicial que se reclama, motivo por el cual, los Jueces de primera y
segunda instancia dispusieron "HABER DADO POR FINALIZADA LA ORDEN JUDICIAL
IMPETRADA", toda vez que la; institución entregó la documentación solicitada. Asimismo, la
accionante sustanció un proceso penal contra COSSMIL, caso penal 10721/2008, por el
supuesto delito de desobediencia a la autoridad, que cuenta con Resolución de rechazo 47/2008
emitida por el Fiscal Leopoldo Ramos Errada, que fue confirmada por Resolución 99/08 de 24
de octubre emitida, por el Fiscal de Distrito de La Paz, Jorge Gutiérrez Roque, antecedentes
acreditados con prueba documental adjunta, por ende no existe vulneración al derecho
constitucional; b) En virtud a las Resoluciones del trámite de orden judicial reclamada, es

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 739


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

inaplicable la multa señalada por el art. 184 del CPC, porque COSSMIL cumplió con la entrega
de la documentación solicitada.

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

La accionante señaló como terceros interesados a sus hijos Irma Fabiola, Luis Ernesto, Sara
Vanesa y Diego Rodrigo Montaño Ralde, así como a Wilma Rosario Urquizu Blazques en su
calidad de madre de Camile Vanessa Montaño Urquizu, aspecto advertido en el AC 030/2011 -
RCA de 7 de febrero, cursante de fs. 177 a 182, que ordena al Tribunal de garantías admita la
acción tutelar; sin embargo, en las diligencias de notificación por cédula con la Resolución
660/2011, emitida por el Tribunal de garantías, donde se señala el día y hora de audiencia de
amparo constitucional, no se tiene consignadas las firmas de los terceros mencionados ni del
notificador, evidenciándose del acta de audiencia pública que los terceros citados tampoco
participaron en la misma, aspecto no observado oportunamente por el Tribunal de garantías.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial ahora Tribunal de Justicia de La
Paz, constituida en Tribunal de garantías, emitió la Resolución 668/2011 de 25 de abril, cursante
de fs. 266 a 269 de obrados, denegando la tutela solicitada, salvando los derechos de la
accionante, en cuanto a la seguridad social de las instancias que prevé el seguro social militar y
ante otras instancias, de acuerdo a los siguientes fundamentos: 1) La acción de amparo
constitucional prevista en el art. 128 de la CPE, se halla dirigida a precautelar derechos
fundamentales de la persona, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección
inmediata de los derechos constitucionales conculcados; 2) El derecho al debido proceso
previsto en el art. 115 de la CPE, comprende entre uno de sus elementos, la exigencia a toda
autoridad de motivar la resolución que dicte de acuerdo a procedimiento; 3) Que conforme al
art. 178 de la CPE, ésta se refiere a la seguridad jurídica ya no como un derecho, sino como un
principio emergente que dentro de un Estado de derecho, significa la protección constitucional
de una actuación arbitraria estatal, además que el derecho a petición en el contexto del art. 24 de
la Norma Fundamental. se refiere al derecho de toda persona y la obligación de las instituciones
públicas o privadas de responder con celeridad las peticiones, que por su naturaleza puedan ser
respondidas con negación o afirmación; y, 4) En el caso de autos, se demuestra por la
documentación acompañada por los demandados, que se habría cumplido con la entrega de
fotocopias y certificaciones pertinentes, por lo que el objeto de la acción queda inconsistente en
virtud al art. 24 de la CPE; sin embargo se observa que COSSMIL debe cumplir y viabilizar los
recursos que prevé la Ley del Seguro Social Militar a objeto de la acreditación negatoria o del
derecho pretendido, situación ajena a la presente acción.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.1 y II de la ley 212 de 23 diciembre de 2011;
la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionado a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las conclusiones que se
señalan a continuación:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 740
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.1. La ahora accionante, Irma Bernalda Ralde Vda. de Montaño, el 2 de septiembre de 2008,
solicitó al Juez de Instrucción de turno en lo Civil del Distrito Judicial de La Paz, orden judicial
para que COSSMIL extienda lo siguiente: i) Copias legalizadas de la Resolución 1458 de 24 de
abril de 2007, de la Junta Superior de Decisiones; ii) Resolución 261/06 de 16 de agosto de
2006, de prestaciones, que dispone el levantamiento de fondos en custodia a favor de la menor
Camile Vanessa Montaño Urquizu, como beneficiaria de seguro social y todos los documentos
cursantes en el registro de la citada menor, antecedentes del proceso interno administrativo
contra Samuel Pomier Rocha, seguido por el registro irregular de la mencionada menor; iii)
Certificación sobre lo siguiente: si cursan o no en el archivo personal de Ernesto Montaño
Araoz, cursan o no las Resoluciones 1458 y 261/06 antes mencionadas, a cuánto asciende y que
sumas de dinero han sido pagadas efectivamente a favor de la menor Camile Vanessa Montaño
Urquizu, antes y después del levantamiento de fondos en custodia, quien solicitó el
levantamiento de los fondos en custodia referidos, porque no se observó que la accionante ya se
hallaba registrada como esposa de Ernesto Montaño Araoz mencionado, porque no existe
documentos relativos a la reunión de Comisión de Prestaciones correspondiente oficio GSg
620/02 de 6 de septiembre de 2002, identifique a la persona responsable de la inexistencia de
documentación correspondiente a la reunión antes indicada y las acciones administrativas
seguidas contra la misma; y, iv) Detalle de la documentación cursante en la Dirección Nacional
de Asuntos Jurídicos de COSSMIL sobre la denuncia y sanción de responsabilidad
administrativa presentada contra Samuel Pomier Rocha y se identifique a la persona que detenta
los archivos de ese proceso administrativo (fs. 8 a 10 vta.).

II.2. Sorteada la mencionada solicitud y radicada en el Juzgado Séptimo de Instrucción en lo


Civil, dicha petición fue atendida mediante decreto de 3 de septiembre de 2008, emitido por la
Jueza, Carolina Terrazas Siles, disponiendo que por ante COSSMIL se franquee la certificación
solicitada y las fotocopias legalizadas solicitadas, siempre y cuando su normativa interna así lo
disponga (fs. 11).

II.3. Posteriormente, la Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil, emitió los decretos de 23 de


diciembre de 2008, conminando a COSSMIL, para que remita en el plazo de setenta y dos horas
la certificación y fotocopias legalizadas ordenadas con anterioridad, bajo alternativa de sanción
pecuniaria compulsiva y progresiva, además de emitir el decreto de 5 de febrero, este último
donde la misma autoridad jurisdiccional dispone, en lo pertinente, que previo a disponer la multa
compulsiva y progresiva, se notifique a COSSMIL para que en setenta y dos horas informe si ha
cumplido con la orden judicial contenida en la disposición de 23 de diciembre de 2008 (fs. 24 a
25; y, 30 y 35).

II.4. En respuesta al último decreto mencionado, COSSMIL, mediante su apoderada y Directora


General de Asuntos Jurídicos, Inés Norberta Castro Alvarado, el 10 de febrero de 2009, informó
ante la Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil, que el 5 de octubre de 2007, Irma Ralde Vda.
de Montaño solicitó ante el Juzgado Octavo de Instrucción en lo Civil, orden judicial para que se
le franquee la misma certificación y las mismas fotocopias legalizadas que solicitó después el 2
de septiembre de 2008, ante el Juzgado Séptimo de Instrucción en lo Civil, donde COSSMIL en
esa anterior oportunidad, mediante nota DPR 1585/07 de 30 de octubre de 2007 y memorial de 4
de diciembre del mismo año, cumplió y entregó lo solicitado a orden expresa del Juzgado
Octavo de Instrucción mencionado, donde se establece que efectivamente se entregó el
certificado SG 13/07 requerido, junto a fotocopias simples y legalizadas de los documentos
mencionados, mismos que fueron recogidos por el hijo de la ahora accionante Luis Ernesto
Montaño Ralde (fs. 85 a 88; 37 a 48 y vta.).

Es así que COSSMIL pidió a la Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil, que por decreto
expreso dé por cumplida la orden judicial emitida y se dé por concluida la competencia de esa
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 741
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

autoridad, solicitud que mediante providencia de 13 de febrero de 2009, se dispuso se ponga en


conocimiento de la interesada (fs. 92).

II.5. Ante la última solicitud de COSSMIL, la interesada, mediante memorial presentado el 20


de marzo de 2009, hizo constar que la mencionada Corporación incumplió la orden judicial de la
Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil, pidiendo el rechazo de lo informado por esa
institución, además de insistir en que se le imponga las sanciones que prevé la ley. Sin embargo,
en el mismo memorial, la ahora accionante, también admitió haber presentado similar solicitud
de orden judicial el 5 de octubre de 2007, ante el Juzgado Octavo de Instrucción en lo Civil, para
lograr la misma información y documentación, que posteriormente, el año 2008, también pidió
ante la Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil, argumentando que lo hizo en ejercicio de sus
derechos, que le facultan a pedir varias veces los documentos de archivos de COSSMIL, para
realizar un sin fin de trámites y acciones ( fs. 105 a 110 vta.).

II.6. La Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil del Distrito Judicial de La Paz, emitió el Auto
definitivo de 23 de marzo de 2009, por el cual declara "por concluida la orden judicial en
consecuencia por concluida la competencia del juzgado respecto a la misma", Auto que apelado
por la ahora accionante, fue confirmado por Auto de Vista contenido en la Resolución 195/09 de
29 de abril de 2009, emitido por la Jueza Tercera de Partido en lo Civil y Consuelo Chacón
Smilt. de Méndez (111 y vta.; y 236 y vta).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia como vulnerados sus derechos a la "seguridad jurídica", a la petición y


al debido proceso; por cuanto al haber logrado que el Juzgado Séptimo de Instrucción del
Distrito Judicial de La Paz, ordene judicialmente a COSSMIL, para que emita a su favor
certificación y fotocopias legalizadas del irregular registro de una menor como hija de su esposo
fallecido, ésta no fue cumplida, por lo cual solicitó nueva conminatoria y sanción de multa a la
mencionada Corporación, mereciendo que la Jueza Séptima de Instrucción en lo Civil, pida
informe a esa entidad de seguridad social, el que evacuado en sentido de haber cumplido con la
orden judicial, la Jueza mencionada, resolvió de manera ilegal dar por concluida la solicitud de
orden judicial, decisión que también ilegalmente fue confirmada en apelación por la Jueza
Tercera de Partido en lo Civil y Comercial del mismo Distrito Judicial. En consecuencia,
corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de denegar o conceder la
tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de Amparo Constitucional.

El art. 128 de la CPE, ha previsto la acción de amparo constitucional contra todos los actos u
omisiones ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva,
que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la
Norma Fundamental y la ley. Por otra parte, el art. 129 de la CPE, prevé que la acción de
amparo constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre
con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución Política
del Estado, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados.

III.2. El derecho a petición.

La Constitución Política del Estado, reconoce el derecho aludido en su art. 24, estableciendo
que: "Toda persona tiene derecho a la petición de manera individual o colectiva, sea oral o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 742
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

escrita, y a la obtención de respuesta formal y pronta. Para el ejercicio de este derecho no se


exigirá más requisito que la identificación del peticionario"; al respecto el art. 24 de la
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, indica: "Toda persona tiene
derecho de presentar peticiones respetuosas a cualquier autoridad competente, ya sea por motivo
de interés general, ya de interés particular, y el de obtener pronta resolución".

En este derecho constitucionalmente reconocido, a decir de Néstor Sagués (en su obra


Elementos de Derecho Constitucional. Tomo 2, Editorial Astrea, Buenos Aires, Argentina
1999), acontecen dos consecuencias: La de "no ser castigado por solicitar algo al Estado…" y
"la de obtener una respuesta de la autoridad a la que se dirige (…).independientemente del
contenido de ella-, en un término razonable, …. donde las autoridades son responsables ante la
comunidad, y ésta es fuente del poder de aquellos. Además, el derecho a respuesta da sentido y
solidez al derecho de peticionar".

III.3. El principio de seguridad jurídica.

En el nuevo orden constitucional, la seguridad jurídica no está instituida como derecho, sino
como principio rector de los actos de la jurisdicción judicial o administrativa, tal es así, que el
art. 178 de la CPE promulgada el 7 de febrero de 2009, lo establece como un principio que
sustenta la potestad de impartir justicia emanada del pueblo, principio general del ordenamiento
jurídico y mandato dirigido a los poderes públicos, que no configura derecho fundamental
alguno a favor de los ciudadanos que pueda ser tutelado por la acción de amparo constitucional,
que por su naturaleza tiene la finalidad de proteger derechos fundamentales y no principios
reconocidos en la Norma Fundamental.

III.4. El derecho al debido proceso.

Sobre el debido proceso, el Tribunal Constitucional, en cuanto no es contrario al orden


constitucional vigente, asume el entendimiento adoptado en la SC 0683/2011-R de 16 de mayo,
que señaló que el debido proceso es: "… el derecho de toda persona a un proceso justo y
equitativo, en el que sus derechos se acomoden a lo establecido por disposiciones jurídicas
generales aplicables a todos aquellos que se hallen en una situación similar; es decir,
comprende el conjunto de requisitos que deben observarse en las instancias procesales, a fin de
que las personas puedan defenderse adecuadamente ante cualquier tipo de acto emanado del
Estado que pueda afectar esos derechos reconocidos por la Constitución Política del Estado así
como los Convenios y Tratados Internacionales".

Sobre los elementos que componen al debido proceso, toda vez que no es contrario al orden
constitucional vigente, este Tribunal asume el entendimiento expresado en la SC 0531/2011-R
de 25 de abril, que de forma enunciativa establece como elementos esenciales de este derecho,
entre otros, al … "derecho a un proceso público; derecho al juez natural; derecho a la igualdad
procesal de las partes; derecho a no declarar contra si mismo; garantía de presunción de
inocencia; derecho a la comunicación previa de la acusación; derecho a la defensa material y
técnica; concesión al inculpado del tiempo y los medios para su defensa; derecho a ser juzgado
sin dilaciones indebidas; derecho a la congruencia entre acusación y condena; el principio del
non bis in idem; derecho a la valoración razonable de la prueba; derecho a la motivación y
congruencia de las decisiones".

La base principista de la Constitución Política del Estado vigente se halla precisada en el art.
178.I de la CPE, donde se establece que: "La potestad de impartir justicia emana del pueblo
boliviano y se sustenta en los principios de independencia, imparcialidad, seguridad jurídica,

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 743


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

publicidad, probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo jurídico, interculturalidad, equidad,


servicio a la sociedad, participación ciudadana, armonía social y respeto a los derechos".

El principio de celeridad procesal que impone a los administradores de justicia el deber jurídico
de despachar los asuntos sometidos a su conocimiento, sin dilaciones indebidas, se vincula a su
vez al principio de economía procesal, que a decir de Rodolfo Espinoza Zevallos "obliga al Juez
como director del proceso a tratar de reducir actos procesales por inútiles o reiterativos, sin
afectar el imperativo que las actuaciones requieran, (…) consiste en el ahorro de tiempo,
esfuerzo y, consecuentemente, dinero o gastos durante el proceso" (El derecho procesal
Constitucional Peruano, Tomo I. Primera edición. Lima-Perú 2005, p. 382-383).

III.5. Con relación al caso concreto.

Con relación a los derechos y principios constitucionales descritos, y su relación al caso


concreto, se establece que la seguridad jurídica que se reclama como derecho vulnerado por la
accionante y que se halla consignado en el art. 178 de la CPE, como un principio constitucional,
en el fondo no se halla tutelado por la acción de amparo constitucional, que de acuerdo al art.
128 Norma Fundamental, sólo procede para tutelar derechos reconocidos por la Constitución y
la ley.

Sobre la supuesta vulneración al derecho a la petición, se establece que en la vía judicial


voluntaria, la petición de la accionante ha sido atendida por la Jueza Séptima de Instrucción del
Distrito Judicial de La Paz, Carolina Terrazas Siles, mediante decretos de 3 de septiembre y 23
de diciembre, ambos de 2008, por los cuales respectivamente dispone y conmina a COSSMIL
que franquee la documentación solicitada, bajo alternativa de sanción; además, como resultado
de ese trámite judicial, la Jueza mencionada, mediante Auto definitivo de 23 de marzo de 2009
(fs. 111 y vta.), compulsando los antecedentes del caso e informe presentado por COSSMIL, ha
establecido que ese ente de seguridad social, ha cumplido la orden judicial indicada, más aún
cuando la misma interesada admitió haber solicitado y recabado esa documentación, situación
que determinó que la decisión judicial mencionada sea confirmada en apelación por Resolución
195/09 de 29 de abril de 2009 (de fs. 236 y vta.), emitida por la Jueza Tercera de Partido en lo
Civil y Comercial Consuelo Chacón Shmilt. de Méndez, de ahí que no se evidencia la existencia
de un daño efectivo al derecho de petición de la interesada, sino una disconformidad con los
resultados de su petición.

Con relación a la posible vulneración al debido proceso, de los antecedentes del caso, se
evidencia que la ahora accionante tuvo plena participación en el trámite voluntario de solicitud
de orden judicial, que tramitó ante el Juzgado Séptimo de Instrucción en lo Civil del Distrito
Judicial de La Paz, donde la misma conoció todas las actuaciones del trámite e incluso interpuso
recursos de reposición y apelación, además de solicitar y lograr fotocopias de los antecedentes
del trámite de orden judicial, aspectos que denotan que no se vulneró por las autoridades
demandadas el derecho al debido proceso que denuncia como afectado la accionante.

Finalmente, con relación al trámite de la acción de amparo constitucional, si bien en otra


circunstancia, la falta de formalidad en las diligencias de notificación a los terceros interesados,
daría lugar a la devolución de obrados al tribunal de origen, para su subsanación, en mérito al
tiempo transcurrido desde la presentación de la acción hasta el pronunciamiento del presente
fallo, se resuelve la causa conforme a los fundamentos expuestos precedentemente, en
aplicación del principio de celeridad y de economía procesal, toda vez que se estableció la
inexistencia de vulneración a los derechos fundamentales invocados.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 744


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En consecuencia, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones del art. 128 de
la CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al denegar la acción de amparo constitucional
efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y dio correcta aplicación al
citado precepto constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Liquidadora del; en virtud de lo previsto


ene. Art. 20.II de ley 212 de 23 de diciembre jurisdicción, en revisión, resuelve:

1º APROBAR la Resolución 668/2011 de 25 de abril de 2011, cursante de fs. 266, 269 de


obrados, pronunciada por la Sala Penal Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial de
ahora del Tribunal Departamental de Justicia La Paz; y en consecuencia DENEGAR la tutela
solicitada.

2° Llamar la atención al Tribunal de garantías, por no haber observado la falta de formalidad


legal, en la que incurrió el Oficial de Diligencias de su despacho, en la realización de las
diligencias de notificación practicadas a los terceros interesados, advirtiendo a ese Tribunal, que
en lo sucesivo actúe y verifique las actuaciones realizadas de acuerdo a procedimiento.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0054/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de libertad
Expediente: 2009-20947-42- AL
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 318/011 de 2 de septiembre de 2011, cursante de fs. 170 a 174,


pronunciada dentro de la acción de libertad interpuesta por Manuel Gonzalo López Castro
contra Jaime Ampuero García y Héctor Sandoval Parada, ex Ministros de la Corte
Suprema- ahora Tribunal Supremo- de Justicia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 27 de noviembre de 2009, cursante de fs. 38 a 45, el accionante


manifestó que:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 745


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A raíz de una temeraria y falsa denuncia realizada por Wilma Muñoz Zeballos, se inició en su
contra un proceso penal por el delito de robo agravado, en base al Código de Procedimiento
Penal de 1972; donde luego de cinco años y de producirse la nulidad de la resolución que le
impuso una pena privativa de libertad de tres años, se dictó una nueva el 5 de octubre de 2001, la
cual sin fundamento le impuso una pena privativa de libertad de seis años, apoyada simplemente
en las declaraciones de un menor que en el momento de los hechos tenía once años de edad y de
otra persona que no estuvo en los supuestos hechos; razón por la que interpuso recurso de
apelación, que mereció el Auto de Vista 75/2002 de 4 de junio, el cual, revocando la resolución
de primer grado, le declaró autor del delito de robo simple, previsto en el art. 331 del Código
Penal (CP), sin considerar atenuantes ni agravantes le impuso una pena privativa de libertad de
cuatro años; última decisión, que fue objeto del recurso de casación en la forma y el fondo,
mismo que fue declarado infundado mediante Auto Supremo de 19 de marzo de 2003,
pronunciado por los Ministros ahora demandados, sin que se encuentre debidamente
fundamentada y/o motivada, pues solo contiene una ligera relación de los hechos.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante denuncia la vulneración de sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la


"seguridad jurídica", citando al efecto los arts. 23, 115 y 117 de la Constitución Política del
Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare "procedente" la acción de libertad, disponiendo la nulidad del Auto Supremo
de 19 de marzo de 2003, ordenando se emita uno nuevo con la debida fundamentación y
circunscribiéndose a las infracciones denunciadas en el recurso de casación; asimismo, se
aplique retroactivamente la pena de tres años, impuesta en la Resolución anulada de 2 de octubre
de 1998; y, consecuentemente se decrete su inmediata libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 2 de septiembre de 2011, según consta en el acta cursante de


fs. 166 a 169 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

Previo a conceder la palabra a los abogados del accionante, por Secretaría se informó haber
citado mediante exhorto a los demandados quienes cesaron en sus funciones como Ministros de
la Sala Penal de Corte Suprema, ahora Tribunal Supremo de Justicia a cuyo efecto se notificó a
sus sustitutos, Ministros Ramiro Guerrero y José Luís Baptista.

Luego de la aclaración precedente, los abogados del accionante ratificaron in extenso los
términos de la acción presentada, y agregaron que luego de interpuesta la presente acción de
libertad el 27 de noviembre de 2009, fue conocida y resuelta por el Juez Primero de Instrucción
en lo Penal del Distrito Judicial de Chuquisaca, ahora Tribunal Departamental que declaró
procedente la ahora acción de libertad; sin embargo, fue anulada por el Tribunal Constitucional,
al considerar que esa autoridad jurisdiccional no tenía competencia por ser los demandados
Ministros de la Corte Suprema de Justicia, correspondiendo por ello su conocimiento a la Sala
Penal de turno, por lo cual expresan su sorpresa, observando al mismo tiempo que en sala y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 746


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

como Tribunal de garantías se encuentra un Vocal de la Sala Social de quien cuestionan su


intervención, reiterando se declare procedente la acción de libertad.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los Ministros José Luís Baptista Morales y Ramiro José Guerrero Peñaranda, en su informe
escrito de fs. 164 a 165 de obrados y leído en la audiencia pública, señalaron: a) Dentro del
proceso penal seguido por Wilma Muñoz Zeballos, contra el ahora accionante Manuel Gonzalo
López Castro, por el delito de robo, en apelación fue condenado a 10 de años de reclusión, fallo
que recurrido en casación mereció el Auto Supremo 147 de 19 de marzo de 2003, que declaró
infundado el recurso, motivando esa decisión a que se ejecutorie la sentencia; b) El accionante
solicitó la revisión extraordinaria de sentencia, misma rechazada por Auto Supremo 428 de 20
de octubre de 2006; c) El 11 de agosto de 2010, el accionante solicitó la extinción de la acción
penal, que fue declarado improcedente por Auto Supremo emitido por los ahora Ministros
informantes y que, también rechazaron la complementación y enmienda peticionada; d) Con
posterioridad al Auto Supremo emitido, se recibió la Resolución del Juez de garantías Primero
de Instrucción en lo Penal, que dejó sin efecto el Auto Supremo 147, el cual para entonces se
encontraba ejecutoriado; sin embargo en cumplimiento a ese fallo constitucional, se emitió
nuevo Auto Supremo 116 de 6 de abril de 2011, suscrito por los Ministros que suscriben el
presente informe, declarando válido el Auto de Vista 75/2002; e) El Auto Supremo que fue
objeto de la acción de libertad ya se encontraba ejecutoriado, siendo innecesario dejarlo sin
efecto por el Juez de garantías, así como también la solicitud de extinción de la acción penal; por
consiguiente, no tiene razón alguna la presentación de la acción de libertad motivo de autos;
solicitando por ello, se declare improbada la pretensión del accionante, con costas.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 318/2011, cursante


de fs. 170 a 174, que denegó la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: i) La acción de
libertad fue presentada después de seis años de haber sido notificado con el Auto supremo que
impugnó, lo que no comparte con la naturaleza y finalidad de esta acción, cuya protección debe
ser inmediata y eficaz de tutela del derecho a la libertad; ii) El impugnado Auto Supremo 147,
no es directo causante de la lesión acusada, por cuanto la amenaza de libertad del accionante se
encuentra relacionada con el mandamiento de condena 01/2011 que tiene su origen en los Autos
Supremos 116 y 119, que no han sido cuestionados en la presente acción de libertad.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.1 y II de la ley 212 de 23 diciembre de 2011;
la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionado a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II.CONCLUSIONES

II.1. Dentro del proceso penal seguido por Wilma Muñoz Zeballos contra Manuel Gonzalo
López Castro (accionante), por el delito de robo agravado, el Juez Segundo de Partido en lo
Penal, dictó la Sentencia de 2 de octubre de 1998, por la que se declaró al accionante, autor del
delito denunciado, condenándolo a la pena de tres años de reclusión (fs. 3 a 7); en grado de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 747


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

apelación, mediante Auto de Vista 84/99 de 10 de marzo de 1999, emitido por la Sala Penal, se
anuló obrados hasta "fs. 306 inclusive" (fs. 8 a 9).

II.2. A raíz de la anulación de obrados, se emitió la Sentencia 13/01 de 5 de octubre de 2001,


donde el Juez de Partido en lo Penal Liquidador, declaró al accionante autor del delito de robo
agravado, sancionándolo a la pena de seis años de reclusión (fs. 14 a 15 y vta.); en grado de
apelación fue revocado por Auto de Vista 75/2002 de 14 de junio, y deliberando en el fondo,
declaró al accionante autor del delito previsto y sancionado, en el art. 331 del CP;
consecuentemente, se le condenó a la pena de cuatro años de reclusión, ordenándose se expida el
mandamiento de condena cuando corresponda (fs. 23 a 24 vta.).

II.3. Mediante memorial presentado el 21 de junio de 2002, interpuso recurso de nulidad en la


forma y recurso de casación en el fondo, contra el Auto de Vista 75/2002; argumentando como
nulidad en la forma que, "muchas" actas de la fase del Plenario no habían sido suscritas y
firmadas por el Juez de la causa y la falta de pronunciamiento sobre los agravios expuestos en el
memorial de apelación; y como casación en el fondo señaló que al igual que el juez de primera
instancia, realizaron una indebida apreciación de la prueba, aplicando incorrectamente el art.
298.3 del adjetivo penal (sic.) por cuanto dieron valor legal a la declaración del sobrino de la
querellante, la cual fue rechazada en la fase de instrucción, lo mismo sucedió con Flora Vedia de
Yucra, Silvia Amaya Romero y Gustavo Montero Vargas, quienes no estuvieron presentes en el
lugar de los hechos; que las declaraciones de Benigno Calle Mendoza y Tito Sandoval
Baldellón, incurren en contradicciones, por lo que no pueden ser tomadas en cuenta; por último,
manifestó que el Auto de Vista impugnado, no indica, menos acredita cuáles son los indicios y
presunciones, para determinar la autoría en el hecho delictivo (fs. 25 a 28).

II.4. Por Auto Supremo 147, las autoridades denunciadas, declararon infundado el recurso de
nulidad y casación, con el fundamento de que "el mismo recurrente se encarga de justificar que
el Juez Ramiro Quiroga, fue quien se encargó de subsanar posteriormente, salvando las
supuestas omisiones y, en igual forma el Tribunal de alzada se ha ceñido a los agravios del
apelante", más adelante se señala que en caso de autos, "se han cumplido plenamente los
elementos del tipo penal, la fuerza utilizada y el ataque al derecho a la propiedad, lo que supone
no solamente la agresión personal a la libertad individual, sino también a la integridad del sujeto
pasivo, que en su condición de mujer las fuerzas no son equiparables a la potencia física
violatoria del autor; quien para ocultar su culpabilidad pretendió cambiar su apellido; pero sin
llegar a desvirtuar su autoría y evitar que su acción reprochable se subsuma en la descripción del
art. 331 del Código Punitivo" (sic.) (fs. 29 a 30).

II.5. A fs. 31, cursa mandamiento de condena 03/07 de 6 de marzo de 2007, emitido por el Juez
Primero de Partido Mixto, Liquidador y de Sentencia; por el que se ordenó a cualquier autoridad
policial del país no impedida por ley, a la aprehensión y detención de Manuel Gonzalo López
Castro (fs. 31); asimismo, de la certificación emitida el 1 de junio de 2009, por el Secretario
General del Establecimiento Penitenciario de San Roque, se tiene que el accionante fue recluido
el 16 de mayo de ese año, en cumplimiento al mandamiento de condena arriba señalado,
registrándose por otra parte el mandamiento de detención preventiva 24/2009 de 16 de mayo,
expedido por el Juez Primero de Instrucción en lo Penal, por la presunta comisión del delito de
hurto (fs. 32).

II.6. La presente acción de libertad fue presentada el 27 de noviembre de 2009, y resuelta por el
Juez Primero de Instrucción en lo Penal, mediante Resolución de 28 de noviembre del mismo
año, declarándola procedente y en consecuencia, dejó sin efecto el Auto Supremo 147,
disponiendo que las autoridades judiciales demandadas emitan uno nuevo, tomando en cuenta
las observaciones de la resolución, así como también dejó sin efecto los actuados procesales
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 748
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

posteriores al del Auto Supremo impugnado, ordenando la inmediata libertad del accionante,
librando el respectivo mandamiento (fs. 72 a 74; 76).

II.7. En cumplimiento al fallo constitucional, se dictó un nuevo Auto Supremo 116, declarando
infundado el recurso de casación y su Auto Supremo complementario 119 de 13 de abril del
mismo año (fs. 155 a 157).

II.8. El fallo pronunciado por el Juez de garantías, en revisión, fue anulado por SC 0691/2011-R
de 16 de mayo, con el fundamento que el Juez de Instrucción en las capitales de departamento
no tiene competencia para conocer y resolver las acciones de libertad (fs. 95 a 103), en cuyo
cumplimiento fue devuelto el expediente y redistribuido a la Sala Penal, que emitió la
Resolución 318/2011, que se revisa (fs. 170 a 174).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración de sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la


"seguridad jurídica", aduciendo que el Auto Supremo 147, emitido por las autoridades
demandadas, no se encuentra debidamente fundamentado y/o motivado, pues simplemente hace
una ligera relación de los hechos, sin resolver todos los agravios denunciados. En consecuencia,
corresponde determinar, en revisión, si los extremos demandados son evidentes para conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad

La acción de libertad es una acción tutelar de carácter extraordinario, que fue instituida en la
Constitución Política del Estado abrogada en su art. 18, y ahora como acción de libertad en el
orden constitucional vigente en el art. 125, manteniendo el mismo carácter y finalidad de
protección a la libertad física o personal, o de locomoción y al debido proceso vinculado con la
libertad, además de haber ampliado su ámbito de aplicación y protección haciéndola extensible
al derecho a la vida, por lo que se constituye en una garantía constitucional por el bien jurídico
primario (vida) y fuente de los demás derechos del ser humano, al señalar: "Toda persona que
considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente
procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de
manera oral o escrita por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante
cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida,
cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a
la libertad".

El texto constitucional contenido en el citado art. 125, establece la naturaleza jurídica de esta
acción tutelar, y la jurisprudencia constitucional señala las característica esenciales como son:
"El informalismo, por la ausencia de requisitos formales en su presentación; la inmediatez, por
la urgencia en la protección de los derechos que resguarda; la sumariedad, por el trámite
caracterizado por su celeridad; la generalidad porque no reconoce ningún tipo de privilegio,
inmunidad o prerrogativa, y la inmediación, porque se requiere que la autoridad judicial tenga
contacto con la persona privada de libertad". (SC 0044/2010-R de 20 de abril).(Las negrillas
nos corresponden)

III.2. Sobre la acción de libertad y las lesiones al debido proceso

Con relación a los alcances de la tutela de la acción de libertad frente a presuntas lesiones al
debido proceso, se asume el entendimiento contenido en la SC 1520/2011-R de 11 de octubre,
que señaló:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 749
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

"Conforme a lo antedicho, cuando en la jurisdicción constitucional se invoque una presunta


lesión al debido proceso en la sustanciación de una causa, es necesario que el acto lesivo
alegado sea la causa directa de la supresión o restricción del derecho a la libertad física. En
ese entendido y considerando estos supuestos, la jurisprudencia emanada de este Tribunal
delimitó los alcances de la tutela otorgada por la acción de libertad, bajo los siguientes
términos: "…en la SC 0619/2005-R de 7 de junio, este Tribunal señaló": 'Consiguientemente, a
partir de la doctrina constitucional sentada en la SC 1865/2004-R de 1 de diciembre, para que
la garantía de la libertad personal o de locomoción pueda ejercerse mediante el recurso de
hábeas corpus cuando se denuncia procesamiento ilegal o indebido deben presentarse, en
forma concurrente, los siguientes presupuestos: a) el acto lesivo, entendido como los actos
ilegales, las omisiones indebidas o las amenazas de la autoridad pública, denunciados, deben
estar vinculados con la libertad por operar como causa directa para su restricción o supresión;
b) debe existir absoluto estado de indefensión, es decir, que el recurrente no tuvo la
oportunidad de impugnar los supuestos actos lesivos dentro del proceso y que recién tuvo
conocimiento del mismo al momento de la persecución o la privación de la libertad…'.

En síntesis, la acción de libertad sólo es procedente cuando el acto lesivo se encuentra


estrechamente vinculado con el derecho a la libertad, como causa directa; es decir, con su
restricción, supresión o amenaza de estas lesiones y en el supuesto de evidenciarse absoluto
estado de indefensión; caso contrario, la parte accionante deberá acudir a la instancia
pertinente cuando se alegue vulneración al debido proceso".

III.2.1. Acción de libertad y falta de motivación y fundamentación

Siguiendo la orientación y habiendo asumido el entendimiento jurisprudencial desarrollado


precedentemente, respecto a la falta de motivación y fundamentación, la misma SC 1520/2011-
R de 11 de octubre estableció:
"…es incuestionable que la alegada vulneración de la garantía del debido proceso, circunscrita
a la supuesta falta de motivación y fundamentación en los Autos Supremos 340 y 175, que
resolvieron las solicitudes de extinción de la acción penal impetradas por el accionante, no
guardan vínculo alguno con la restricción de la libertad física de su representado, quien quedó
constreñido al cumplimiento de la Sentencia condenatoria dictada en su contra, dentro de un
proceso penal en el que ejerció defensa plena, deducible de la interposición de los recursos
ordinarios dispuestos a su favor, conforme se describe en las Conclusiones de la presente
Resolución; circunstancias que confirman la inviabilidad de los alcances de la tutela de la
acción de libertad, al no concurrir los presupuestos de activación requeridos para su
procedencia, e impidiendo que este Tribunal ingrese al análisis de fondo de los hechos
denunciados".

III.3. El caso concreto

En el caso examinado, el accionante sostiene que fue indebidamente procesado, por cuanto fue
sometido a proceso penal en el que se le dictó sentencia condenatoria imponiéndole la pena de
seis años de reclusión, por ser supuestamente autor del delito de robo agravado, fallo que en
apelación fue revocado, así como la pena impuesta a cuatro años de privación de libertad, por el
delito de robo, resolución confirmada en casación al haberse declarado infundado el recurso.
Alega asimismo, que fue condenado sin motivación ni fundamento alguno.
En el caso de autos, de los antecedentes procesales se constata, que el accionante impugnó -
mediante esta acción de libertad - el Auto Supremo 147, el que fue dejado sin efecto por el Juez
Primero de Instrucción en lo Penal, así como los posteriores actuados procesales al Auto
Supremo impugnado, disponiendo también su inmediata libertad. Ahora bien, en cumplimiento
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 750
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

del fallo constitucional se emitió un nuevo Auto Supremo 116 y Auto Supremo complementario
119, a cuya consecuencia se libró el respectivo mandamiento de condena contra el accionante.

Al respecto, los aspectos denunciados por el accionante están vinculados al debido proceso, el
que es tutelado cuando concurren los supuestos que lo hacen viable, es decir que: a) El acto
lesivo, entendido como los actos ilegales, las omisiones indebidas o las amenazas de la autoridad
pública, denunciados, deben estar vinculados con la libertad por operar como causa directa para
su restricción o supresión; b) Debe existir absoluto estado de indefensión; es decir, que el
accionante no tuvo la oportunidad de impugnar los supuestos actos lesivos dentro del proceso y
que recién tuvo conocimiento del mismo a momento de la persecución o la privación de la
libertad; presupuestos que en el caso de autos no se presentan; toda vez que, se ha evidenciado
que la supuesta falta de motivación y fundamentación invocada no está vinculada directamente
con su libertad, cuya restricción responde a la ejecución de una sentencia condenatoria dictada
dentro del fenecido proceso penal seguido en su contra, no siendo evidente la indefensión
absoluta, toda vez que ha usado de los recursos y medios legales previstos por ley en ejercicio de
su derecho a la defensa; circunstancia que determina, se deniegue la tutela, sin considerar el
fondo de la acción, de acuerdo a los entendimientos jurisprudenciales asumidos en los
Fundamentos Jurídicos III.2 y III.2.1., del presente fallo.

En consecuencia, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones del art. 125 de
la CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al denegar la acción de libertad efectuó una
adecuada compulsa de los antecedentes procesales y dio correcta aplicación al citado precepto
constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 318/2011 de 2 de septiembre, cursante de fs. 170 a 174, dictada por
la Sala Penal de la Corte Superior, ahora Tribunal Departamental de Justicia del Distrito de
Chuquisaca; y en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0056/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de Amparo Constitucional
Expediente: 2009-20647-42-AAC
Departamento: Chuquisaca

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 751


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En revisión la Resolución 289/09 de 2 de octubre de 2009, cursante de fs. 171 a 176 y vta.,
pronunciada, dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Victor Kattán
Salame, en representación de KATTAN y CIA LTDA., contra Beatríz Sandóval de
Capobianco y Jaime Ampuero García, Ministros de la Sala Social y Administrativa
Primera de la Corte Suprema de Justicia ahora Tribunal Supremo de Justicia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

En el escrito de acción de amparo constitucional presentada el 22 de septiembre de 2012,


cursante de fs. 96 a 103, el accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En el año 1992, el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), culminó un procedimiento de


fiscalización a la empresa que representa "KATTAN y CIA LTDA.", en virtud del cumplimiento
de obligaciones fiscales de los periodos 1987 y 1988. Posteriormente se dictó la Resolución de
16 de octubre de 1992 y emitió el Pliego de Cargo 58/94 de 17 de febrero de 1994, por
supuestos adeudos tributarios de las gestiones 1986, 1987 y 1988, cursando también dentro del
mismo cuerpo de antecedentes, el Pliego de Cargo 730/94 por adeudos tributarios de la gestión
1991. Es así que dentro del referido proceso administrativo, el 19 de noviembre de 2001, solicitó
la declaratoria de prescripción respecto de la deuda tributaria contenida en los Pliegos de Cargo
58 y 730 emitidos el año 1994, que fue rechazada mediante Resolución Administrativa de 3 de
diciembre de 2001, contra la cual, el 4 de marzo de 2002, dedujo Acción Contenciosa Tributaria,
misma que se radicó en el Juzgado Primero en lo Administrativo, Coactivo Fiscal y Tributario
de Cochabamba, primera instancia que culminó con la Sentencia de 30 de marzo de 2004, que
declaró improbada la demanda, resolución que fue confirmada en apelación por Auto de Vista
16/2004 de 18 de junio dictado por la Sala Social y Administrativa de la Corte Superior del
Distrito Judicial ahora Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba.

El Auto de Vista pronunciado en segunda instancia, fue recurrido de casación en el fondo,


acusando la errónea aplicación normativa sobre el cómputo de plazos de prescripción en la
primera instancia y también la equivocada apreciación del Auto de Vista al pretender aplicar el
plazo de prescripción de la Ley de Administración y Control Gubernamentales SAFCO, sobre
una situación específica del Código Tributario Boliviano y que se ha aplicado e interpretado
erróneamente el art. 307 del Código Tributario Boliviano (CTB) en las decisiones citadas, lo que
no implica que la deuda deba prescribir, sino que ésta es una causal de extinción de la obligación
tributaria, además que no puede prorrogarse indefinidamente la cobranza de una deuda
tributaria, siendo errado el cómputo de prescripción realizado en el Auto de Vista al considerar
que los hechos generadores acontecieron el año 1986; sin embargo el cómputo lo realizó desde
el pliego de cargo 730/94 por adeudos tributarios de la gestión 1991, recurso que fue declarado
infundado a través del Auto Supremo 74 de 2 de marzo de 2009, emitido por la Sala Social y
Administrativa de la Corte Suprema, argumentando que se habría omitido la acusación de
infracción, violación, errada interpretación o indebida aplicación de la ley expresa y terminante,
además que los adeudos tributarios se encuentran ejecutoriados al ser los Pliegos de Cargo, la
fase final de la acción administrativa y se encuentran los trámites en cobranza coactiva, no
siendo aplicable el art. 52 del CTB al no versar la causa sobre determinación de tributos o
aplicación de sanciones, sino solo el art. 307; fallo, cuya ejecución fue dispuesta por providencia
de 9 de marzo de 2009 y notificada el 23 del mismo mes y año ante el juzgado de origen,
vulnerando los derechos de la empresa que representa los principios de seguridad jurídica y al

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 752


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

debido proceso en su elemento del derecho a la motivación de las decisiones, consagrados por la
Constitución Política del Estado.

I.1.2. Derechos supuestamente vulneradas

El accionante denuncia la vulneración de los derechos a la seguridad jurídica y al debido proceso


en su elemento del derecho a la motivación de las decisiones, citando al efecto los arts. 114.II y
IV; y, 117 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción de amparo constitucional y se declare: a) La nulidad del Auto


Supremo 74, disponiendo que la Sala Social y Administrativa de la Corte Suprema, dicte uno
nuevo declarando la prescripción de la obligación tributaria contenida en los Pliegos de Cargo
58/94 y 1517/92, emitidos por el SIN; y b) Se establezca, costas, daños y perjuicios.

I.2.Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 2 de octubre de 2009, según consta en acta cursante de fs. 168
a 170 y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

Los abogados de la accionante ratificaron in extenso los términos de la acción presentada, y los
ampliaron señalando que: 1) El rechazo in límine solicitado por la parte demandada no
corresponde, porque el Tribunal de garantías al admitir la acción verificó los requisitos de forma
como de contenido, en consecuencia no puede alegar el incumplimiento del principio de
inmediatez. Por otra parte, conforme a la jurisprudencia constitucional no existe cosa juzgada
cuando se violan derechos y garantías fundamentales; 2) Las autoridades demandadas pretenden
que se aplique erróneamente la Ley de Administración y Control Gubernamental 1178, cuando
debe ser el Código Tributario la norma especial. En este caso, la Corte Suprema, ha convalidado
la confusión en que incurrió el Juez de grado respecto a la prescripción, toda vez, que el Auto
Supremo señala que en la etapa coactiva no se puede plantear la prescripción, lo que no es
evidente como lo ha establecido la jurisprudencia constitucional que en fase de cobranza se
puede interponer la misma; y 3) El régimen legal de la prescripción de adeudos busca que los
derechos prescriban, por inacción del titular, cuando transcurren más de cinco años;
consiguientemente, las autoridades demandas no pueden soslayar este régimen y contrariar la
abundante jurisprudencia constitucional, correspondiendo por ello, conceder la tutela solicitada
y dejar sin efecto el referido Auto Supremo.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

La demandada, Ministra de la Sala Social y Administrativa de la Corte Suprema, Beatriz


Sandóval de Capobianco, en su informe escrito cursante de 138 a 142, señaló que: i) El art. 54
del CTB expresamente señala como mecanismo de interrupción de la prescripción la
determinación del tributo ante cuya manifestación material se inicia un nuevo cómputo, pues
una vez cumplido el proceso de fiscalización, se expide la Resolución Determinativa del tributo
contra la que el sujeto pasivo puede oponerse ya sea por la vía administrativa o jurisdiccional,
conforme previene el art. 174 del CTB en un término perentorio de quince días, bajo pena de
quedar firme la referida Resolución Determinativa, misma que una vez ejecutoriada al no haber
sido impugnada o agotadas las impugnaciones presentadas, se inicia la etapa del cobro coactivo
de acuerdo con el art. 304 y ss. del CTB, es decir la ejecución de resoluciones pasadas en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 753
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

autoridad de cosa juzgada, siendo aplicable el art. 305 del mismo Código, es decir que la
ejecución coactiva no puede suspenderse por ningún recurso ordinario o extraordinario, ni por
ninguna solicitud que pretenda dilatarla o impedirla, salvo las excepciones del pago
documentado o nulidad del título; ii) La prescripción es posible sea aplicada no solo a la
potestad del Estado para determinar tributos sino también para ejecutar vía coactiva los tributos
debidamente determinados y que causaron ejecutoria. Es así, que en el primer caso para
determinar tributos corre desde el 1 de enero del año siguiente al que se produjo el hecho
generador, produciéndose su interrupción con la determinación del tributo y en el segundo caso,
la prescripción para ejecutar coactivamente los adeudos tributarios firmes, corre desde la
ejecutoria de la Resolución Determinativa por otro tiempo similar al del plazo para la
determinación tributaria. Consiguientemente, como en el caso presente, que se alega
prescripción en ejecución de fallos (etapa de cobro coactivo), debe entenderse que se trata de la
prescripción de la potestad del Estado a ejecutar coactivamente sus adeudos firmes, más no su
potestad de determinar esos adeudos tributarios como contrariamente entiende el accionante; y,
iii) Por lo expuesto el Tribunal de garantías debe rechazar in límine la presente acción y en caso
de considerar el fondo, en mérito a los argumentos precedentes, deniegue el recurso
constitucional pretendido, con multa y costas.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

La apoderada legal del tercero interesado, Remy Orlando Delgadillo Rojas, Gerente Distrital
Interno del SIN, en su memorial cursante de fs. 164 a 167, manifestó: a) Dentro de los procesos
de fiscalización realizados a la empresa que representa el accionante, previa emisión de las
Resoluciones Determinativas, se emitieron tres Pliegos de Cargo: 1517/92, 58 y 730 de 1994,
encontrándose ejecutoriados los dos últimos, toda vez que el 1517/93 fue declarado nulo y sin
efecto legal, mediante sentencia de 30 de marzo de 2004, fallo que a la vez rechazó la
prescripción solicitada de los otros Pliegos de Cargo, y que fue confirmada en todas las
instancias culminando con el Auto Supremo 74 de 2 de marzo de 2009, ahora impugnado,
habiendo adquirido la calidad de cosa juzgada en proceso de cobro coactivo de adeudos
tributarios, y cuya ejecución no puede suspenderse al ser aplicable el art. 307 del CTB y no
como pretende el accionante el art. 52 del mismo cuerpo de leyes; b) La presente acción debe
ser rechazada in límine, al haber sido presentada extemporáneamente, fuera de los seis meses
establecidos al efecto, por cuanto el Auto Supremo cuestionado fue emitido y notificado el 2 de
marzo de 2009 y esta acción la interpuso el accionante el 22 de septiembre del mismo año, vale
decir 6 meses y 20 días después, además de no cumplir con los requisitos que establece la
jurisprudencia constitucional para admitir recursos de amparo constitucional a más del plazo
señalado, al no existir lesión a los derechos fundamentales que se invocan en la demanda; y c)
En el presente caso, los Pliegos de Cargo han emergido de un proceso de determinación sea por
la administración tributaria o por autodeterminación realizada por el contribuyente, concluyendo
todos en una relación que reviste calidad de cosa juzgada por mandato del art. 305 del CTB,
adquiriendo por ello, el carácter de inmutabilidad, ejecutabilidad y coercibilidad. Por otra parte,
la Administración Tributaria ha ejercitado su derecho de determinar adeudos tributarios, aplicar
sanciones, e imponer multas, en suma determinar la obligación impositiva, además de exigir y
buscar el pago de estos tributos, sus intereses y recargos; solicitando por lo manifestado, se
declare la improcedencia de la presente acción constitucional.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal, constituida en Tribunal de garantías, pronunció el Auto 289/09 de 2 de octubre de


2009, cursante de fs. 171 a 176 y vta. de obrados, que concedió la tutela y en consecuencia dejó
sin efecto el Auto Supremo 074/2009, disponiendo se dicte uno nuevo conforme a derecho y
subsanando lo observado en el fallo, con los siguientes fundamentos: 1) El Auto Supremo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 754
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

incurrió en error, toda vez que el tercer considerando, establece que el recurso de casación no
cumplió con los requisitos previstos en el art. 258.2 del Código de Procedimiento Civil (CPC),
lo que constituye causal de improcedencia; sin embargo lo declaró infundado; 2) En el mismo
considerando en forma posterior contradictoriamente, ingresa al análisis de fondo de manera
genérica, señalando que los jueces de instancia obraron correctamente; y 3) El Tribunal
Supremo, no resolvió de manera clara ni concreta ninguno de los motivos expuestos por el
recurrente, careciendo el Auto Supremo de la ineludible y debida fundamentación y motivación.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art.20.I y II de la ley de 212 de 23 de diciembre de
2011; la sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformo la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los magistrados de la misma, el15 de febrero de 2012, a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas al os Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre del 2011, en el marco de la ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro el plazo.

II.CONCLUSIONES

II.1. Dentro de la demanda contenciosa tributaria interpuesta el 5 de marzo de 2002 por el


accionante Víctor Kattán, en representación de la empresa "KATTAN y CIA.LTDA.", contra la
Dirección Distrital de Impuestos Internos - Regional Cochabamba, solicitando la prescripción de
las obligaciones contenidas en los Pliegos de Cargo 1517/92, 58 y 730 de 1994, emitidos por la
Dirección Distrital de Impuestos Internos, el Juzgado Primero de Partido Administrativo,
Coactivo Fiscal y Tributario de Cochabamba, dictó la sentencia de 30 de marzo de 2004,
declarando improbada la demanda (fs.22 a 24; 29 a 31 y vta.).

II.2. Apelada la Sentencia de primera instancia, la Sala Social y Administrativa de la Corte


Superior del Distrito Judicial de Cochabamba, pronunció el Auto de Vista 016/2004,
confirmando la resolución apelada, fallo contra la cual el accionante presentó recurso de
casación en el fondo, que fue resuelto por la Sala Social y Administrativa de la Corte Suprema,
mediante el Auto Supremo 074, que declaró infundado el recurso interpuesto (fs. 33 a 34; 36 a
38; 44 a 45).

II.3. El Auto Supremo 074, fue notificado al ahora accionante, mediante cédula en el tablero de
la Secretaría de Cámara de la Sala Social y Administrativa, el 10 de marzo de 2009 (fs. 46).

II.4. La presente acción de amparo constitucional fue presentada el 22 de septiembre de 2009


(fs. 96 a 103).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que de la empresa que representa se han vulnerado los derechos a la
seguridad jurídica y al debido proceso en su elemento del derecho a la motivación de las
decisiones, por cuanto dentro del proceso contencioso tributario que sigue contra el SIN, sobre
prescripción de pliegos de cargo, los demandados, Ministros de la Sala Social y Administrativa
de la Corte Suprema, declararon infundado el recurso de casación, aplicando erróneamente la
Ley de administración y Control Gubernamentales 1178 (SAFCO), siendo que en el caso de
autos es aplicable el Código Tributario Boliviano, y esencialmente al carecer el Auto Supremo
impugnado de la debida motivación y fundamentación que debe contener ineludiblemente toda
resolución judicial o administrativa. En consecuencia, corresponde determinar, en revisión, si los
extremos demandados son evidentes para conceder o denegar la tutela solicitada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 755
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es una acción tutelar de carácter extraordinario, cuya


finalidad es la protección de los derechos fundamentales de las personas, establecida en el art.
128 de la CPE, procede: "…contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley".

A su vez, el art. 129 de la misma CPE establece que: 'I. La Acción de Amparo Constitucional se
interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por
la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal
competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los
derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados. II. La Acción de Amparo
Constitucional podrá interponerse en el plazo máximo de seis meses, computable a partir
de la comisión de la vulneración alegada o de notificada la última decisión administrativa o
judicial" (las negrillas son nuestras).

III.2. Principio de inmediatez de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional se halla instituida y reconocida en la Ley Fundamental en su


art. 128, como también lo estuvo en el art. 19 de la Constitución Política del Estado abrogada
(CPEabrg) que consagró al recurso de amparo constitucional, con la misma naturaleza jurídica y
como un medio de tutela de carácter extraordinario, cuyos principios de subsidiariedad e
inmediatez inherentes a su propia naturaleza son los que la rigen y se aplican también en la
interposición de la acción de defensa.

Es así, que como exigencia ineludible de la persona física o jurídica que considera haberse
vulnerado o restringido sus derechos o garantías fundamentales y que pretende la protección o
restablecimiento de los mismos, debe cumplir con el principio y ahora requisito legal de la
inmediatez, es decir buscar esa tutela en forma pronta, oportuna e inmediata, al haber agotado -
previamente - los recursos o medios legales que la ley le franquea. Por ello, el Art. 129.II de la
CPE estableció esta acción tutelar debe ser interpuesta dentro de los seis meses, plazo que se
computa a partir de la comisión de la vulneración o restricción que se denuncia o de notificada la
última determinación judicial o administrativa. El entendimiento expresado sigue el asumido por
la SC 1461/2011-R de 10 de octubre., toda vez que la misma no contraviene el orden
Constitucional vigente y es concordante con los razonamientos expresados en el párrafo
precedente.

Dentro del contexto señalado, la exigencia procesal de la inmediatez, tiene justificación en que
la jurisdicción constitucional no puede aguardar de manera indefinida que el titular del derecho
solicite su protección, pues en su propio interés debe ser diligente en cuanto al respeto y
vigencia de sus derechos, además de hallarse directamente vinculada a los principios de
preclusión y celeridad, los mismos que no sólo dependen de los actos de la autoridad sino
también del peticionante, quien debe estar compelido por su propio interés a realizar el
seguimiento que corresponda a su solicitud, de modo que cuando no ha sido diligente en propia
causa no puede pretender que esta jurisdicción esté supeditada en forma indefinida para
otorgarle protección, entendimiento jurisprudencial contenido en las SSCC 0770/2003-R y
1809/2011-R, entre otras.

III.3. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 756


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

El accionante, denuncia que se vulneraron los derechos a la seguridad jurídica y al debido


proceso en su elemento del derecho a la motivación de las decisiones de su representada
empresa "KATTAN y CIA. LTDA.", toda vez que dentro del proceso contencioso tributario que
sigue contra el SIN, sobre prescripción de pliegos de cargo, los demandados, Ministros de la
Sala Social y Administrativa de la Corte Suprema, ahora Tribunal Supremo declararon
infundado el recurso de casación, aplicando erróneamente la Ley de Administración y Control
Gubernamentales, siendo que en el caso de autos es aplicable el Código Tributario Boliviano, y
esencialmente al carecer el Auto Supremo impugnado de la debida motivación y
fundamentación que debe contener ineludiblemente toda resolución judicial o administrativa.

Al respecto, de acuerdo a los antecedentes procesales, se constata que el impugnado Auto


Supremo 074, pronunciado por la referida Sala, fue notificado al ahora accionante (representante
de la empresa "KATTAN y CIA. LTDA."), en Secretaría de Cámara el 10 de marzo de 2009,
fecha a partir de la cual se inicia el cómputo del término de los seis meses, previstos por el art.
129.II de la CPE, al constituir precisamente la última decisión judicial relacionada con los actos
que se consideran ilegales, pues esa es la Resolución judicial de cierre o de última instancia que
podría afectar al fondo de lo resuelto, más aún, si fue el accionante quien interpuso el recurso de
casación, y en otro distrito judicial circunstancia por la cual al haber sido admitido su recurso
planteado, tenía el deber de realizar el seguimiento en su tramitación teniendo presente que a
través del mismo existía la posibilidad de ser modificada la situación de la empresa; es decir que
en esa instancia debió proceder con lealtad y responsabilidad ante el órgano jurisdiccional que
representa al Estado Plurinacional, en consideración a que el impulso procesal no sólo es
atribución de las autoridades jurisdiccionales, sino también de ambas partes o sujetos procesales,
puesto que en el proceso y recurso se define su situación jurídica. Por otra parte, al constituir el
Auto Supremo la última instancia judicial o medio idóneo para la reparación de derechos
considerados lesionados, es que, desde su notificación corre el cómputo del plazo, en tanto que
el decreto de "cúmplase" emergente de la devolución del expediente, es un acto procesal que no
hace al fondo de lo ya resuelto por el Tribunal de máxima instancia de la jurisdicción ordinaria.

A lo que se añade, que en el caso de autos, la notificación con el Auto Supremo 074 en sede de
la Corte Suprema de Justicia, y con el decreto de cúmplase en el Tribunal de apelación, fueron
notificados mediante cédula (fs. 46 y 109), en consecuencia, no se puede restar validez a una
notificación y dársela a la otra, cuando las dos tienen la misma formalidad y efectos. En ese
entendido siendo evidente que la presente acción de amparo constitucional fue presentada el 22
de septiembre de 2009, se concluye que la misma fue interpuesta de manera extemporánea, fuera
de los seis meses; y por tanto, no es posible ingresar al análisis de fondo de la problemática
planteada y denunciada como ilegal, entendimiento que sigue el asumido por la SC 0347/2010-R
de 15 de junio, toda vez que la misma no contraviene el orden Constitucional vigente y es
concordante con los razonamientos expresados precedentemente; circunstancia que inviabiliza
se conceda la tutela solicitada.

En consecuencia, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones del art. 128 de
la CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al conceder la acción de amparo constitucional no
efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes procesales ni dio correcta aplicación al
citado precepto constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo previsto en el art.


20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve: REVOCAR la
Resolución 289/09 de 2 de octubre de 2009, cursante de fs. 171 a 176 y vta., dictada por la Sala

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 757


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Social y Administrativa de la Corte Superior del Distrito Judicial ahora Tribunal Departamental
de Justicia de Chuquisaca; y en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

No interviene la Magistrada, Carmen Silvana Sandoval Landívar, por excusa declarada legal.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0057/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Macario Lahor Cortez Chávez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19841-40-AAC
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 16 de 14 de mayo de 2009, cursante de fs. 54 a 56, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Carlos Fuchtner Maradey, en
representación legal de Leila Tudela Ávila, Miguel Rocha Justiniano, Hernán Aguilera
Viveros, Hugo Limpias López y Armando Cortez Cortez contra Rafael Bandeira Arze,
Prefecto del departamento de Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 12 de mayo de 2009, cursante de fs. 36 a 41, el accionante, a


nombre de sus mandantes, expresa los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A consecuencia de la Convocatoria emanada por el Prefecto del departamento de Pando,


mediante notas dirigidas a los Presidentes de los concejos municipales de capitales de provincia
del departamento, al haber fenecido las funciones de los anteriores consejeros departamentales,
de conformidad al mandato contenido en el art. 16.I del Decreto Supremo (DS) 27431 de 7 de
abril de 2004, los Concejos Municipales pertenecientes a las provincias de Nicolás Suárez,
Madre de Dios y Manuripi, decidieron reunirse a fin de elegir y designar a sus autoridades,
resultando elegidos sus mandantes del siguiente modo: Leila Tudela Ávila como Consejera
Departamental por población y Miguel Rocha Justiniano Consejero Departamental por territorio,
ambos de la provincia Nicolás Suárez; Hugo Limpias López como Consejero Departamental por
población y Hernán Aguilera Viveros Consejero Departamental por territorio, de la provincia
Madre de Dios; y, finalmente Armando Cortez Cortez como Consejero Departamental por
territorio de Manuripi.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 758


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En este contexto, a través de la Asociación de Municipalidades de Pando, como ente


representativo de los gobiernos municipales de dicho departamento, se enviaron las actas de
sesiones de elección de los aludidos Consejeros Departamentales, mediante nota CITE:
AMDEPANDO 003/09 de 9 de enero de 2009, al Prefecto y Comandante General de Pando, a
fin de dar posesión a cada uno de los elegidos en los cargos correspondientes; sin embargo, al no
haberse dado curso a dicha solicitud, se la reiteró mediante nota de 1 de abril de la gestión
citada, habiendo recibido respuesta mediante nota SAJ cite 299/09 de 15 del citado mes y año,
en la cual se hizo conocer que el Prefecto sólo daría posesión a Ana María Miyashiro Mercado,
como Consejera Departamental, dado que habría ganado una acción de amparo constitucional
interpuesto anteriormente y que no podía proceder a la posesión requerida al no permitirlo la ley;
empero, no existe disposición alguna que faculte a la autoridad demandada, a observar la
legalidad de la elección de los Consejeros Departamentales, por cuanto el control del
cumplimiento de los requisitos por parte de los candidatos, así como la legalidad del acto de
votación es de competencia exclusiva de los concejales participantes en la designación, quienes
una vez realizada la misma extendieron el Acta pertinente que hace plena fe de lo actuado,
correspondiendo al Prefecto recibirla para realizar los actos necesarios para la posesión de los
Consejeros Departamentales, al no haberlo hecho incumplió el mandato del art. 12 del DS
27431, que ordena ministrar posesión y asegurar la participación de los Consejeros
Departamentales en las sesiones del Consejo Departamental, para luego extenderles la
credencial correspondiente. Al haber actuado en contrario desconoció implícitamente sus
designaciones en forma ilegal y arbitraria, sin ninguna atribución, impidiéndoles asumir y
ejercer el cargo para el cual fueron democráticamente elegidos, cometiendo con ello una
omisión indebida.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de los derechos de sus representados al trabajo y a ejercer una
función pública, citando al efecto los arts. 26.I y II.5; y, 46 de la Constitución Política del Estado
(CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conmine al Prefecto del departamento de Pando a ministrar posesión en el cargo de


Consejeros Departamentales por población y territorio a sus representados, en el día de dictada
la Resolución por parte del Tribunal de garantías; y, la reparación de daños y perjuicios en la
suma de Bs100 000.- (cien mil 00/100 bolivianos).

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 14 de mayo de 2009, conforme consta en el acta cursante a fs.
53 y vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

En audiencia el accionante aclaró que día anterior sus mandantes Hernán Aguilera Viveros y
Leila Tudela Ávila fueron posesionados en sus cargos; empero, sus dietas de todas maneras se
afectaron con la violación de sus derechos al trabajo y a ejercer la función pública. En cuanto a
los agraviados Miguel Rocha Justiniano, Hugo Limpias López y Armando Cortez Cortez,
ratificó los argumentos de su demanda.

Con el derecho a la réplica, el accionante afirmó que si bien existe una resolución que pretende
dar posesión a Hugo Limpias López, ello no significa posesión, ya que ni siquiera se le notificó.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 759
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Con relación a Miguel Rocha Justiniano, en antecedentes existe una nota de 1 de abril de 2009,
donde todos sus representados solicitaron la respectiva posesión, en similar sentido se redactó la
nota de 9 de enero del citado año.

Respondiendo al cuestionamiento emanado por el Tribunal de garantías, el accionante aclaró que


el DS 27431 sólo señala que se remitirá al Prefecto el Acta de designación y no otros requisitos.
Las Actas fueron acompañadas a las solicitudes de posesión.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El apoderado de la autoridad demandada, en audiencia argumentó que día anterior a la audiencia


de garantías se procedió a posesionar a dos Consejeros, y que ya se había dispuesto obrar del
mismo modo con Hugo Limpias López.

En relación a Miguel Rocha Justiniano y Armando Cortez Cortez, recién solicitaron su posesión
el 6 de mayo de 2009; sin embargo, la solicitud fue observada porque no presentaron el Acta de
la Resolución del Concejo donde se los designaba, más otros requisitos de rigor, habiendo
argüido Armando Cortez Cortez, que se estaba trasladando a la localidad de Porvenir para
recabar los documentos extrañados.

Con el derecho a la réplica, el apoderado del demandado afirmó que el DS 29690 derogó los
arts. "10 al 16" (sic) de su similar 27431; en consecuencia, el prefecto no tiene facultad de
posesionar a los consejeros; aún así, en mérito a una acción de amparo constitucional posesionó
a "Miashiro".

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niña, Niño y Adolescente de la


Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de Justicia de Pando-,
constituida en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 16 de 14 de mayo de 2009,
cursante a fs. 54 a 56, por la que concedió la tutela, ordenando la posesión inmediata de los
Consejeros que no hubieran sido objeto de dicha posesión y que Armando Cortez Cortez, que se
encuentra ausente, sea posesionado a su presentación, sin lugar a la reparación de daños,
perjuicios y costas, de acuerdo a los siguientes argumentos: a) En el mismo Tribunal de
garantías, se dictó la Resolución de 6 de junio de 2006, dentro de la acción de amparo
constitucional interpuesta por Antonio Moreno, "concejal elegido", contra el entonces Prefecto
Leopoldo Fernández, quien se negó a ministrarle posesión, arguyendo que no se siguieron los
pasos necesarios para su elección, al no haberse realizado en la capital de provincia y que para la
instalación del acto se requería la presencia de más de uno de los miembros de los concejales
municipales, al respecto el Tribunal Constitucional determinó en sus SSCC 0691/2007-R de 9 de
agosto, 0705/2003-R, 1545/2002-R, 1559/2002-R, 0672/2005-R, que no existe disposición legal
alguna que faculte al Prefecto del departamento a observar la designación de consejeros
departamentales, dado que la Ley de Descentralización Administrativa, en su arts. 3.II y 12.I y II
del DS 24997, no prevé tal extremo, siendo competencia exclusiva de los concejales
participantes en la elección el velar por el cumplimiento de los requisitos de los candidatos,
correspondiendo al Prefecto recibir el acta respectiva, realizar los actos necesarios para ministrar
posesión al elegido y asegurar su participación en las sesiones del Consejo Departamental; b) El
Acta de elección para consejero departamental es un instrumento que hace plena fe y es el único
documento que debe presentarse ante la Prefectura y el Prefecto para con éste ministrar
posesión, conforme lo dispuesto por el art. 12 del DS 27431; c) En cuanto al argumento que
utiliza el demandado, sobre la existencia del DS "29691", en obrados existe un informe jurídico
del Ministerio de la Presidencia, que expresa que el mismo se derogó tácitamente y por lo tanto
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 760
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

no es aplicable; y, d) Con referencia a los daños y perjuicios que demanda el accionante, no


fueron causados por el Prefecto; dado que los agraviados no interpusieron la acción en el tiempo
oportuno, no procede conceder la tutela al respecto.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan
seguidamente:

II.1. De acuerdo al Acta 09/2008 de 8 de diciembre, Leila Tudela Ávila y Ana María Miyashiro
Mercado, fueron elegidas como Consejeras Departamentales por población del municipio
Nicolás Suárez; el Acta 59/2008 de 8 de diciembre, demuestra la elección de Hugo Limpias
López en el cargo de Consejero departamental por población; el Acta 61/2008 de 15 de
diciembre, evidencia la elección de Hernán Aguilera Vivero como Consejero Departamental por
territorio, ambos por el municipio Madre de Dios; el Acta de 30 de enero de 2009, demuestra
que Armando Cortez Cortez fue elegido como Consejero Departamental por territorio del
Municipio de Manuripi; en el Acta 43 de 29 de diciembre de 2008 consta que Miguel Rocha
Justiniano, fue elegido como Consejero Departamental por territorio del municipio de Nicolás
Suárez (fs. 19 a 30).

II.2. Como respuesta a la solicitud de posesión efectuada por los representados del accionante,
con excepción de Armando Cortez Cortez, para su correspondiente posesión por el Prefecto y
Comandante General del departamento de Pando en su calidad de Consejeros Departamentales
(fs. 32), el Secretario de Asuntos Jurídicos de la Prefectura del departamento de Pando, mediante
nota SAJ CITE 299/09 de 15 de abril de 2009, determinó que a consecuencia de una acción de
amparo constitucional planteada por Ana María Miyashiro Mercado, se procedería a su posesión
el 16 de abril de la citada gestión; empero, con relación a los demás solicitantes, no se les
posesionaría sosteniendo que la ley no se lo permitía, de conformidad a lo establecido por el DS
29690 de 28 de agosto de 2008 (fs. 33).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, por sus mandantes en su condición de Consejeros Departamentales electos de


Pando, argumenta que sus derechos al trabajo y a ejercer una función pública fueron vulnerados
por el Prefecto quien incumplió el mandato contenido en el art. 12 del DS 27431 que le impone
la obligación de ministrarles posesión una vez elegidos por sus municipios. En consecuencia,
corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes y si constituyen actos
ilegales lesivos de los derechos fundamentales o garantías constitucionales del accionante, a fin
de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 761


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

La acción de amparo constitucional constituye una garantía jurisdiccional extraordinaria, que


posibilita el efectivo ejercicio de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución
Política del Estado, tratados y convenios internacionales y las leyes y "…tendrá lugar contra
actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley." (art. 128 de la CPE).

De acuerdo a su configuración constitucional, se puede concluir que la acción de amparo


constitucional es una garantía constitucional, consagrada "...en la Constitución con la finalidad
de otorgar protección a las personas en el ejercicio pleno de sus derechos fundamentales y sus
garantías constitucionales normativas, contra los excesos, abusos o arbitrariedades de
funcionarios públicos, autoridades o personas particulares, expresados a través de resoluciones,
actos u omisiones ilegales o indebidas. La protección no es pasiva sino activa, por cuanto el
Amparo Constitucional permite restablecer o restituir el derecho fundamental o garantías
constitucional normativa en aquellos casos en los que estén restringidos o suprimidos o, en su
caso, evitar la consumación de la amenaza inminente de restricción o supresión de los mismos"
(Rivera Santivañez, José Antonio, Jurisdicción Constitucional, Procesos Constitucionales en
Bolivia, Editorial Kipus, 2011, p. 380); en consecuencia, "…la pretensión del actor en el proceso
de amparo no es otra que el restablecimiento de un derecho fundamental subjetivo de naturaleza
constitucional…su 'finalidad última', es también proporcionar el significado exacto de esos
derechos, el significado que les atribuye el máximo intérprete de la Constitución" (Cardozo
Daza, Richard Eddy, El proceso de amparo constitucional, Fundamentos de doctrina y
jurisprudencia, Editorial Universitaria, 2010, p. 67).

Ahora bien, de acuerdo a su naturaleza jurídica y conforme manda la Ley Fundamental, la


acción de amparo ostenta los principios de subsidiariedad e inmediatez. El primero implica que
sólo será posible su activación en caso de haberse agotado los recursos o mecanismos de defensa
judiciales ordinarios o administrativos (art. 129.I CPE); y, el segundo, que el mismo deberá
interponerse en el plazo máximo de seis meses de ocurrida la vulneración alegada o de
notificada la última decisión administrativa o judicial (art. 129.II de la CPE), principios que de
no observarse harían a la improcedencia de la acción y por ende imposible el análisis de la
problemática planteada.

Otro tema que constituye de sustancial importancia establecer, es el del ámbito de protección de
esta acción tutelar, por cuanto si bien de manera general, la Constitución determinó que se
activará contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona
individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley, debe tomarse en cuenta que existen otros
mecanismos constitucionales destinados a la protección de determinados derechos
fundamentales y garantías constitucionales, en ese entendido, el derecho a la libertad está
tutelado por la acción de libertad, el derecho a la autodeterminación informativa, por la acción
de protección de privacidad; y, los derechos colectivos por la acción popular, correspondiendo a
continuación determinar cuál es el ámbito de protección de la acción de cumplimiento, por ser
atinente a la problemática planteada.

III.2. Naturaleza jurídica de la acción de cumplimiento

De lo aseverado se infiere que la Ley fundamental ha previsto diferentes mecanismos de


defensa, con distintas y específicas finalidades, de modo tal que dependiendo de los hechos
denunciados, los derechos y garantías amenazados o vulnerados, el accionante podrá activar la
vía constitucional extraordinaria pertinente en defensa de sus intereses.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 762


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En el sentido aludido, se tiene a la acción de cumplimiento como una garantía constitucional,


que procede "…en caso de incumplimiento de disposiciones constitucionales o de la ley por
parte de servidores públicos, con el objeto de garantizar la ejecución de la norma omitida" (art.
134.I de la CPE), que si bien en su tramitación ostenta el mismo procedimiento que la acción de
amparo constitucional, su finalidad difiere trascendentalmente de la misma, dado que su objeto
es el de lograr que la jurisdicción constitucional, a través de sus autoridades competentes,
ordenen al servidor público renuente o remiso, dar cumplimiento a un deber concreto,
incondicional, claro e imperativo contenido en la Ley Fundamental o las leyes.

De acuerdo a la norma constitucional citada, la acción de cumplimiento extiende su ámbito de


protección a normas de la Constitución Política del Estado y las leyes, habiendo determinado la
jurisprudencia constitucional, al respecto, el siguiente razonamiento: "…el objeto de tutela de
esta acción está vinculado a garantizar el cumplimiento de un deber contenido en: a) Normas
constitucionales, las cuales, como se ha visto, tienen un valor normativo inmediato y directo y
a cuya observancia están obligados los servidores públicos y los particulares (arts. 9.4, 108
numerales 1, 2 y 3 y 410 de la CPE); b) La Ley, entendida no en el sentido formal -como
originada en el órgano legislativo- sino material, sin importar la fuente de producción,
abarcando, por tanto, a decretos supremos, resoluciones supremas, la legislación
departamental y municipal, a cuyo cumplimiento también se obligan los particulares y los
servidores públicos (arts. 14.V y 108.1 de la CPE)" (las negrillas nos pertenecen) (SC
0258/2011-R de 16 de marzo), entendimiento que es asumido por este Tribunal, en resguardo de
los principios de legalidad, supremacía constitucional y seguridad jurídica.

III.3. Análisis del caso concreto

De los argumentos planteados por el accionante se tiene que una vez elegidos sus mandantes
Consejeros Departamentales de Pando, como resultado de una votación realizada por los
Concejales Municipales de los Municipios de Madre de Dios, Nicolás Suárez y Manuripi, se
vieron impedidos a ejercer los cargos para los que fueron electos y por ende asistir a las sesiones
ordinarias y extraordinarias del Consejo Departamental ante la negativa de la autoridad
demandada de ministrarles posesión, en total inobservancia del art. 12 del DS 27431.

Conforme se evidencia de lo expuesto, el accionante alude a la omisión de un mandato


contenido en el art. 12 del DS 27431, que ordenaría al Prefecto demandado a dar posesión de los
Consejeros Departamentales elegidos por sus respectivos municipios; es decir, invoca la
protección constitucional ante la renuencia de la autoridad demandada a cumplir un mandato
expreso e imperativo contenido en el Decreto Supremo apuntado, argumentos que corresponden
ser dilucidados a través de una acción de cumplimiento, como garantía constitucional
específicamente prevista para los casos en que un servidor público incumpla lo dispuesto en la
Norma fundamental o las leyes, para el caso concreto, lo ordenado en un articulado de un
decreto supremo, conforme se determinó en el Fundamento Jurídico III.1.2; sin embargo, el
actor planteó una acción de amparo constitucional, susceptible de ser activada en caso de
vulneración o amenaza de restricción de derechos fundamentales y garantías constitucionales, no
tutelados por otras acciones de defensa específicamente previstas para el estudio de
determinados hechos vulnerantes de derechos, configurándose un mecanismo de defensa
inidóneo para el análisis de la problemática planteada.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber concedido la tutela solicitada no evaluó


adecuadamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo, debiendo, en su lugar,
haberla denegado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 763


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria; en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión resuelve:

1º REVOCAR la Resolución 16 de 14 de mayo de 2009, cursante de fs. 54 a 56, pronunciada


por la Sala Civil, Social, de Familia, de la Niña, Niño y Adolescente de la Corte Superior del
Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de Justicia de Pando-; y, en consecuencia,

2° DENEGAR la tutela solicitada; y,

3° Mantener los efectos de la concesión pronunciada por el Tribunal de garantías, con la


finalidad de evitar perjuicios a terceras personas.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi .-magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco .-magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0058/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19570-40-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 112/2009 de 9 de abril, cursante de fs. 63 a 66, pronunciada dentro de


la acción de amparo constitucional interpuesta por Filder Carvajal Mendoza en
representación de Hugo Carrasco Callejas, Fiscal de Materia contra Mario Uribe Melendres,
Fiscal General del Estado.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 2 de abril de 2009, cursante de fs. 32 a 35 vta., se tiene


conocimiento de los siguientes argumentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante por su representado manifiesta que, a partir del 13 de abril de 2004 ejerció las
funciones de Fiscal de Materia primero en Chapare-Cochabamba y luego en Villazón-Potosí; y,
de manera posterior, debido a un concurso de meritos y examen de oposición al cual se sometió,
fue designado como Fiscal de Materia III del Distrito de Potosí el 23 de noviembre de 2005,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 764
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

cargo institucionalizado, por lo que se le asignó como asiento laboral la ciudad capital señalada;
sin embargo, el Fiscal General, hoy demandado, a solicitud del Fiscal de Distrito de Potosí,
mediante Memorando 149/2009 de 9 de marzo, dispuso su desplazamiento temporal al asiento
Fiscal de Llallagua, por el plazo de seis meses, asignándole la tarea específica de sanear toda la
carga procesal existente, al amparo del art. 36.11 de la Ley Orgánica del Ministerio Público
(LOMP).

Refiere también que, si bien el Fiscal General del Estado, tiene ciertas atribuciones al respecto,
señala que no aplicó correctamente el art. 36.11 de la LOMP en el cual basa dicha decisión,
puesto que no observó los tres presupuestos que dicha norma exige de manera expresa y
simultánea, incurriendo en flagrante violación de sus derechos fundamentales, por lo que
presentó recurso de objeción para lograr la revocatoria del Memorando en cuestión, ante lo cual
mediante Resolución 023/2009 de 13 de marzo, la autoridad demandada ratificó el Memorando
de desplazamiento.

Concluye sosteniendo que, no existía razón para desarraigarlo de su lugar de trabajo y que al
consignarse genéricamente en el Memorando referido que debía atender toda la carga procesal
existente, no se cumplió con lo previsto por la normativa indicada, en lo referente a "tareas
especificas", como tampoco se dio una declaratoria en comisión, convirtiendo su desplazamiento
en indefinido y dejando de lado el derecho de los Fiscales a la estabilidad laboral.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante por su representado, denuncia como vulnerados sus derechos al debido proceso, a
la "seguridad jurídica" y al trabajo en su vertiente de estabilidad laboral, citando al efecto los
arts. 46.1 y 2; 109 y 115 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita se conceda la tutela y se disponga se deje sin efecto el Memorando


149/2009 y Resolución 023/2009, manteniéndose su lugar de trabajo en la ciudad de Potosí,
condenándose costas, daños y perjuicios ocasionados.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 9 de abril de 2009, según consta en el acta cursante de fs. 57 a
62 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante ratificó inextenso el contenido de la acción de amparo constitucional.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El apoderado de la autoridad demandada Mario Uribe Melendres, Fiscal General del Estado, dio
lectura al informe escrito cursante de fs. 52 a 56, refiriendo en lo principal que: a) La decisión
del Fiscal General, para el desplazamiento temporal del accionante esta enmarcada en el art.
36.11 de la LOMP; b) El traslado temporal no es una sanción sino una decisión ejecutiva
administrativa, por tanto la decisión de desplazar al "accionante", de la ciudad de Potosí a la
localidad de Llallagua por seis meses para realizar un trabajo especifico -sanear toda la carga
procesal existente- no vulnera el debido proceso que, como ha establecido el Tribunal
Constitucional, rige en toda actividad sancionadora; y, c) El accionante continua ostentando el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 765
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

cargo de Fiscal de Materia, recibiendo una remuneración por ello, lo que demuestra que la
decisión de desplazamiento no afectó de ninguna manera su derecho al trabajo.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Chuquisaca, constituida en Tribunal de garantías, por Resolución 112/2009 de 9
de abril, cursante de fs. 63 a 66, denegó la tutela solicitada, con costas y multa al accionante,
con los siguientes fundamentos: 1) El Fiscal General, asignó al representado del accionante una
tarea especifica, la cual era "sanear toda la carga procesal" (sic); 2) Respecto a la temporalidad,
ésta también fue cumplida, al haberse fijado el límite de seis meses para el desplazamiento
dispuesto, lo que impide entender que se trate de un traslado, por lo que el art. 29. 4 de la
LOMP, fue respetado; 3) En cuanto a la falta de declaratoria en comisión, si bien no fue
declarado en tal condición, entendiéndose que se debe al tiempo del desplazamiento que impide
una declaratoria en comisión tan prolongada, pues supondría para el Ministerio Público erogar
viáticos por todo ese tiempo; 4) El derecho al debido proceso como el de defensa, deben ser
reclamados dentro de un proceso ya sea judicial o administrativo, lo que en autos no existe, pues
el representado del accionante no fue sometido a proceso alguno en el que se hubieren vulnerado
sus derechos fundamentales, tratándose en el presente caso solamente de una decisión ejecutiva;
5) El representado del accionante objetó el 10 de marzo de 2009, el Memorando 0149/2009, al
amparo del art. 55 de la LOMP, dando origen a la Resolución DGF 023/2009 en la que el
Memorando mencionado se mantiene incólume, por lo que no se puede alegar violación al
derecho a la defensa; y, 6) Se constató que el representando del accionante se encuentra en pleno
ejercicio de la función fiscal, gozando de un trabajo remunerado, por lo que tampoco se puede
alegar la afectación al derecho al trabajo.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. Hugo Carrasco Callejas, el 23 de noviembre de 2005, fue nombrado Fiscal de Materia III
del Distrito de Potosí, por el Fiscal General del Estado
(fs. 4).

II.2. Mediante Cite FDP-099/2009 de 9 de marzo, Gustavo Calvo Ugarte, Fiscal de Distrito de
Potosí, solicitó a Mario Uribe Melendres, Fiscal General del Estado, se sirva ordenar el
desplazamiento del "Fiscal de Materia II Hugo Carrasco Sequeiros, al asiento fiscal de
Llallagua, por un periodo de seis meses y, con la tarea específica de sanear toda la carga
procesal allí existente" (sic) (fs. 42).

II.3. Por Memorando 149/2009 de 9 de marzo, el Fiscal General Mario Uribe Melendres, hizo
conocer a Hugo Carrasco Callejas, "Fiscal de Materia II", al amparo del art. 36.11 de la LOMP,
su desplazamiento temporal al asiento de Llallagua, por el periodo de seis meses, con la tarea
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 766
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

específica de sanear toda la carga procesal existente, para lo que debía presentarse ante el Fiscal
de Distrito, quien le asignará las funciones a desempeñar (fs. 43).

II.4. El 11 de marzo de 2009, Hugo Carrasco Callejas, al amparo del art. 56 de la LOMP, objetó
el instructivo contenido en el Memorando 149/2009 (fs. 44 a 47); mereciendo la Resolución
DGF 023/2009 de 13 de marzo, dictada por el Fiscal General, ratificando y manteniendo
incólume el citado memorando (fs. 48 a 49).

II.5. A través del Instructivo 022/2009 de 10 de marzo, Gustavo Calvo Ugarte, Fiscal de Distrito
de Potosí, en cumplimiento del Memorando "140/2009", le instruye a Hugo Carrasco
Callejas, Fiscal de Materia, que debe constituirse en el asiento fiscal de Llallagua hasta el 31 del
citado mes y año, para proseguir todos los procesos investigativos a cargo del Fiscal de
Materia, Trifón Romero Arratía (fs. 9).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante por su representado sostiene que la autoridad demandada lesionó sus derechos
fundamentales al debido proceso, a la "seguridad jurídica" y al trabajo en su vertiente de
estabilidad laboral, al emitir el memorando 149/2009 y la Resolución 023/2009, que lo ratifica,
los cuales disponen su desplazamiento del asiento fiscal de Potosí al asiento de Llallagua, puesto
que no observó los tres presupuestos establecidos por el art. 36.11 de la LOMP. En
consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. De los derechos alegados como vulnerados

III.1.1. Del debido proceso

El debido proceso se encuentra consagrado en el texto constitucional en una triple dimensión, en


los arts. 115.II y 117.I como garantía, en el 137 como derecho fundamental y en el art. 180 como
principio procesal; en ese sentido, el Tribunal Constitucional, en la SC 1373/2011-R de 30 de
septiembre, haciendo mención a la SC 1896/2010-R de 25 de octubre, señaló: "…Se entiende
que el derecho al debido proceso es de aplicación inmediata, vincula a todas las autoridades
judiciales o administrativas y constituye una garantía de legalidad procesal que ha previsto el
Constituyente para proteger la libertad, la seguridad jurídica y la fundamentación o motivación
de las resoluciones judiciales…'. Así también, la garantía del debido proceso, en su componente
de acceso a la justicia, ha sido desarrollada por el Tribunal Constitucional en la SC 1534/2003-
R de 30 de octubre, como: '…el derecho de toda persona a un proceso justo y equitativo, en el
que sus derechos se acomoden a lo establecido por disposiciones jurídicas generales aplicables
a todos aquellos que se hallen en una situación similar; asegura a las partes el conocimiento de
las resoluciones pronunciadas por el órgano judicial o administrativo actuante durante el
proceso a objeto de que puedan comparecer en el juicio y asumir defensa. En virtud de ello, los
órganos jurisdiccionales que conozcan de un proceso deben observar los principios, derechos y
normas que la citada garantía resguarda, infiriéndose de ello que ante la vulneración de los
mismos se tiene por conculcada la referida disposición', '…comprende el conjunto de requisitos
que deben observarse en las instancias procesales a fin de que las personas puedan defenderse
ante cualquier tipo de acto emanado del Estado que pueda afectar sus derechos' SC 1276/2001-
R entre otras".

III.1.2. De la seguridad jurídica en la Constitución Política del Estado

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 767


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Conforme al entendimiento de la Constitución Política del Estado promulgada el 7 de febrero de


2009, la seguridad jurídica constituye uno de los principios que sustenta la potestad de
impartir justicia conforme al mandato contenido en el art. 178 de la misma norma,
entendiendo que la interpretación constitucional debe orientarse a mantener la seguridad jurídica
y la vigencia del Estado de Derecho, pues las normas constitucionales constituyen la base del
resto del ordenamiento jurídico.

A partir de lo manifestado, éste Tribunal en su SC 1390/2011-R de 30 de Septiembre, ha


establecido a la seguridad jurídica: "…Como principio general informador de la potestad de
impartir justicia, otorga una importancia fundamental, como orientación axiológica para la
comprensión del sistema jurídico nacional, condiciona la actividad discrecional de la
administración y de la jurisdicción, y constituye además, el sentido teleológico para la
interpretación, integración y aplicación de las normas jurídicas" (las negrillas son nuestras).

III.1.3. Del derecho al trabajo

Al respecto, el art. 46.I.1 de la CPE, establece que: "Toda persona tiene derecho: Al trabajo
digno, con seguridad industrial, higiene y salud ocupacional, sin discriminación, y con
remuneración o salario justo, equitativo y satisfactorio, que le asegure para sí y su familia una
existencia digna".

En ese sentido, la jurisprudencia constitucional estableció en la SC 0571/2010-R de 12 de julio,


que el derecho al trabajo se entiende como un: "…Derecho de naturaleza social y económica
que significa la potestad o derecho que tiene toda persona según su capacidad y aptitudes, a
buscar un trabajo, postularse o acceder al mismo, y mantenerlo, claro está de conformidad a
las circunstancias y exigencias del mismo, y según el orden normativo que lo regula, de tal
manera que en base a este derecho quien desarrolla la actividad física o mental pueda
procurarse su propia manutención como la de su familia, para subsistir en condiciones mínimas
de dignidad humana".

Entendiéndose en consecuencia, que toda persona tiene derecho a un trabajo, con condiciones
equitativas y satisfactorias, con el cual tenga seguro para sí y su familia una existencia humana
digna, debiendo ejercerlo de manera que no se afecte el bien común ni el interés colectivo.

III.2. Análisis del caso concreto

En el caso de autos, el accionante por su representado, considera vulnerados sus derechos


fundamentales, toda vez que la autoridad demandada, al emitir el Memorando 149/2009, no
aplicó correctamente el art. 36.11 de la LOMP, puesto que no concurren los tres presupuestos
establecidos por dicha normativa, ya que se dispuso su desplazamiento sin indicarle si era de
carácter temporal, además no se consignó en su contenido de manera precisa los asuntos
específicos que debía atender, como tampoco se lo declaró en comisión, por lo que solicitó se
deje sin efecto el citado Memorando, al igual que la Resolución 023/2009, que ratifica el mismo.

En cuanto a la inaplicación del art. 36.11 de la LOMP

De la revisión de los antecedentes del caso, a partir del Memorando 149/2009, suscrito por el
Fiscal General, mediante el cual dispone el desplazamiento temporal del representado del
accionante, se tiene conocimiento de que: "Por razones de servicio y con la facultad otorgada
por la ley 1517 Ley Orgánica del Ministerio Público Art. 36 Inc. 11) y ante solicitud del señor
fiscal de Distrito de Potosí, con la tarea específica de sanear toda la carga procesal existente,
se ha dispuesto su desplazamiento temporal al asiento fiscal de Llallagua, por un periodo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 768
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de 6 meses, para tal efecto deberá presentarse ante el señor Fiscal de Distrito, autoridad
que le asignara las funciones a desempeñar" (sic) (fs. 43); ahora bien, el art. 36.11 de la
LOMP, faculta a la autoridad demandada a "disponer el desplazamiento de fiscales por
razones de servicio, para la atención de asuntos específicos, declarándoselos en comisión,
sin que esto implique el traslado del lugar de sus funciones"; por tanto, el Memorando en
cuestión y la Resolución 023/2009, no contravienen lo previsto por el art. 36.11 de la LOMP,
toda vez que el desplazamiento fue por un periodo de seis meses, es decir de carácter
excepcional y temporal, lo cual supone entender que no se trata de un traslado, lo cual
guarda relación con la falta de declaratoria en comisión extrañada por el accionante, toda
vez que dicha ausencia se debe al tiempo del desplazamiento (6 meses), lo que impide una
declaratoria en comisión prolongada, ya que supondría erogar viáticos por todo ese
tiempo, por lo que dichos presupuestos fueron cumplidos. Sobre el presupuesto referente a la
asignación de asuntos específicos, éste también fue cumplido, ya que no solo se le indicó que
debía sanear toda la carga procesal existente en el asiento fiscal de Llallagua, sino también
cuando el Fiscal de Distrito de Potosí, mediante el Instructivo 022/2009, le instruye
proseguir todos los procesos investigativos a cargo de Trifón Romero Arratia, Fiscal de
Materia (fs. 9).

En cuanto a los derechos invocados a ser tutelados

Tal como se tiene establecido en el Fundamento Jurídico III.2 de esta Sentencia, haciendo el
análisis correspondiente, respecto al debido proceso, cabe hacer mención que, contra el
representado del accionante no se activó ningún proceso judicial o administrativo, dentro
del cual se haya producido una acción u omisión por parte de la autoridad a cargo del
mismo, por lo que tomando en cuenta la jurisprudencia citada precedentemente, no se puede
conceder tutela sobre el mismo.

Respecto a la seguridad jurídica, conforme se manifestó en el Fundamento Jurídico III.1.2. de


esta Resolución, tampoco puede ser tutelado, toda vez que constituye un principio de la
administración de justicia, como lo prevé el art. 178 de la CPE, por lo que mas bien la
interpretación constitucional debe orientarse a su protección.

Finalmente, de la intervención de las partes y de la documental adjunta, respecto al derecho al


trabajo invocado, se puede evidenciar que al momento de la presentación y tramitación de
la acción constitucional que nos ocupa, el representado del accionante se encontraba en el
ejercicio de la función fiscal, vale decir, gozando de un trabajo remunerado, por lo que
conforme se señaló en el Fundamento Jurídico citado precedentemente, tampoco puede alegar
lesión alguna de este derecho.

Por todos los argumentos señalados, consecuentemente, se colige que el Memorando 149/2009 y
la Resolución 023/2009, emitidos por la autoridad demandada, no vulneraron derecho alguno del
representado del accionante, toda vez que se hallan enmarcados dentro de la normativa
establecida al efecto.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al haber denegado la tutela solicitada, efectuó una


adecuada compulsa de los antecedentes y empleó correctamente las normas aplicables al caso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011, en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 112/2009 de 9 de abril, cursante de fs. 63 a 66, dictada por la Sala
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 769
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de
Justicia- de Chuquisaca; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0060/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Macario Lahor Cortez Chávez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20362-41-AAC
Departamento: Oruro

En revisión la Resolución de 21 de agosto 2009, cursante de fs. 25 a 27 vta., pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional interpuesta por Carlos Martín Zepita Arevillca contra
Elías Choque Ayca, Alcalde y, José Llanque Llanque, Oficial Mayor Administrativo,
ambos del Gobierno Municipal de Challapata.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 13 de agosto de 2009, cursante de fs. 10 a 11 vta., el


accionante expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 18 de febrero del 2008 el Alcalde Municipal de Challapata lo designó, mediante memorando


HAMCH 62/08, como Jefe de Finanzas de esa institución. Posteriormente, estando en el
ejercicio de sus funciones, el 16 de febrero del 2009, de manera sorpresiva le entregaron un
memorando de agradecimiento de servicios 0214/2009, recibido en la misma fecha, hecho que
considera arbitrario, ilegal, e injustificado por llevar únicamente la firma de José Llanque
Llanque, Oficial Mayor Administrativo, autoridad que considera incompetente para realizar
despidos, conforme al art. 44.6 de la Ley de Municipalidades (LM).

En la misma fecha, puso su situación en conocimiento del Alcalde y de la Presidenta del


Concejo Municipal; sin embargo, no obtuvo respuesta, teniendo que acudir a la Jefatura
Departamental de Trabajo, cuya autoridad se excusó de atender la denuncia alegando que los
hechos se encontrarían al amparo de la “Ley 2027 y 2028 Ley de Municipalidades” (sic)
recomendándole seguir el procedimiento administrativo ante el Gobierno Municipal.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 770


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Continua argumentando que: “…una de las atribuciones del señor Alcalde municipal es
precisamente 'designar, retirar a los oficiales mayores y personal administrativo' vale decir que
esta es una atribución enteramente privativa del alcalde y no así del oficial mayor
administrativo, conforme emerge el memorando de fecha 16 de febrero de 2009 (…) se tiene
que la misma emerge del oficial mayor administrativo y no así del alcalde en consecuencia se
establece claramente que existió un injustificado e ilegal despido de mi persona máxime si esta
autoridad al lograr mi despido usurpa funciones que no emane de la ley” (sic).

Finalmente, resalta el hecho que el memorando cuestionado se sustenta en el “Art. 8 Inc. a)” de
la Constitución Política del Estado (CPE), cuya fecha de emisión es de ocho días después que
entró en vigencia la Ley Fundamental; empero, el artículo citado, no se refiere a ningún aspecto
de despido o atribuciones municipales; en consecuencia, no esta basado en normas aplicables y
vigentes, aspecto que resta legalidad a dicho documento.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima lesionados sus derechos a la “seguridad jurídica” y al trabajo, citando al


efecto únicamente el art. 46.I de la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare la “procedencia” de la tutela, disponiendo: a) La nulidad del memorando


0214/2009, emitido por el José Llanque Llanque, Oficial Mayor Administrativo; y, b) Se
disponga: 1) Su reincorporación inmediata a su fuente laboral como Jefe de Finanzas; y, 2) El
pago de sus sueldos y beneficios “colaterales” de orden social, acumulados desde el 16 de
febrero de 2009, hasta la fecha -de presentación de la acción de amparo constitucional-.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 21 de agosto de 2009, conforme consta en el acta cursante de


fs. 17 a 25, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El actor mediante su abogado, ratificó los términos expuestos en la demanda tutelar.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Alcalde Municipal de Challapata, Elías Choque Ayca, presente en audiencia, mediante su


abogado, argumentó: i) Aclara que el Estatuto del Funcionario Público establece cinco tipos o
clases de servidores públicos: los electos, los designados, dentro el cual se encuentra el caso que
ahora tratamos; los funcionarios de libre nombramiento, los de carrera y, finalmente, los
funcionarios interinos, normativa que dispone, al referirse a los funcionarios designados, que
son aquellas personas cuya función pública se ejerce a través de un nombramiento a cargo
público conforme la Constitución Política del Estado o Sistema de Administración de Personal;
entonces, los funcionarios designados no están sujetos a las disposiciones de carrera
administrativa; ii) Efectivamente el Alcalde Municipal demandado nombró como Jefe de
Finanzas a Carlos Martín Zepita Arevillca, situación que haría procedente la acción de amparo
constitucional; sin embargo, conforme argumenta el accionante el memorando de
agradecimiento de servicios esta firmado por José Llanque Llanque, Oficial Mayor
Administrativo, supuestamente actuando sin competencia y usurpando funciones; en
consecuencia, se está ingresando al ámbito de otro tipo de recurso que nos reconoce la Norma
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 771
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fundamental en su art. “102, inciso 12” (sic), referente al recurso directo de nulidad; iii) El
agraviado al haber planteado la revocatoria del memorando de 16 de febrero del 2009, equivocó
el procedimiento ya que lo hizo ante el Alcalde Municipal, cuando debió impugnarlo ante la
misma autoridad que la emitió que es el Oficial Mayor Administrativo, como autoridad emisora,
conforme dispone el art. 44 de la Ley de Procedimientos Administrativos (LPA); para luego,
advertido de su error pueda tener la posibilidad de modificarlo o definitivamente anularlo; y si
no respondía dentro del plazo establecido en la norma, se operaba el silencio administrativo, lo
que le hubiera permitido interponer tanto el recurso de revocatoria como el jerárquico, pudiendo
haberse aperturado, a partir de ese momento, su “competencia” para interponer el recurso directo
de nulidad y no la acción de amparo constitucional; iv) La Constitución Política del Estado nos
esta señalando que son nulos los actos de los que usurpen funciones, entonces -se pregunta- será
que la nulidad se cuestionará mediante una acción de amparo constitucional que tiene otra
connotación jurídica; y, v) Los arts. 79, 80 y 81 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC),
determina que procede el recurso directo de nulidad contra todo acto o resolución de quien
usurpe funciones que no le competen así como también contra los actos de quien ejerza
funciones o potestad que no emane de la ley, también establecido en el art. 122 de la CPE.

El codemandado José Llanque Llanque, no asistió a la audiencia tutelar, ni presentó informe


escrito, a pesar de su legal citación (fs. 13).

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez de Partido de Sentencia, del Trabajo, Seguridad Social y Niñez y
Adolescencia del Distrito Judicial de Oruro, constituido en Juez de garantías, pronunció la
Resolución de 21 de agosto de 2009, cursante de fs. 25 a 27 vta., por la que concedió la tutela
constitucional impetrada, disponiendo en su mérito: a) Dejar sin efecto y nulo de pleno derecho
el memorando 0214/2009, firmado por José Llanque Llanque, ahora ex Oficial Mayor
Administrativo del municipio de Challapata; y, b) La restitución inmediata del accionante en el
cargo de Jefe de Finanzas del referido Municipio, debiendo reconocer los sueldos, vacación y
otros derechos que reconocen las normas laborales, bajo los siguientes argumentos: 1) Se
evidencia que Elías Choque Ayca, Alcalde Municipal de Challapata, designó al accionante como
Jefe de Finanzas de dicha entidad y por memorando 0214/2009 de 16 de febrero, el Oficial
Mayor Administrativo, agradeció sus servicios prestados. Al respecto el art. 44.6 de la LM,
dispone que designar y retirar a los oficiales mayores y personal administrativo es atribución del
alcalde municipal; y, 2) Del despido referido es que nace la acción de amparo constitucional ya
que el accionante ha sido retirado por una autoridad que no tenía competencia para ello, siendo
de responsabilidad exclusiva del Alcalde Municipal, codemandado; consiguientemente,
corresponde reparar esos derechos en este caso suprimidos y restringidos.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de la normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de la acciones tutelares ingresadas a los Tribunal de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presenta causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan
seguidamente:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 772
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.1. Del memorando HAMCH 62/08 de 18 de febrero del 2008, se establece que Carlos Zepita
Arevillca, fue designado por Elías Choque Ayca, Alcalde Municipal, como Jefe de Finanzas del
Gobierno Municipal de Challapata (fs. 1), evidenciándose que por disposición de José Llanque
Llanque, Oficial Mayor Administrativo, por memorando 0214/2009 de 16 de febrero, se
agradeció los servicios prestados en la institución (fs. 2).

II.2. Por notas exhibidas, de 16 de febrero del 2009, ante el Alcalde y la Presidenta del Concejo,
se tiene que el accionante presentó sus reclamos ante la decisión asumida por el Oficial Mayor
(fs. 3 y 4); presentando el 18 del mencionado mes y año, memorial dirigido al Alcalde con copia
al Concejo Municipal formalizando su solicitud de revocatoria (fs. 5 a 6) .

II.3. El 20 de febrero del 2009, el agraviado acudió a la Dirección Departamental del Trabajo de
departamento de Oruro, denunciando la vulneración de sus derechos, además la retención de
sueldos, cuya autoridad se excusó de atender el caso alegando que la denuncia se encontraba
bajo el ámbito de protección del Estatuto del Funcionario Público y Ley de Municipalidades,
recomendándole seguir el procedimiento administrativo ante el Gobierno Municipal (fs. 7 y
vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que las autoridades demandadas vulneraron sus derechos a la “seguridad
jurídica” y al trabajo, por cuanto el Oficial Mayor Administrativo del municipio de Challapata,
usurpó funciones y actuó sin competencia al emitir el memorando 0214/2009, dado que debía
ser emitido y firmado por el Alcalde Municipal, autoridad que tiene plena competencia para ello
conforme al art. 44.6 de la LM. En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales
argumentos son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos de los derechos fundamentales
del accionante, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1.Naturaleza jurídica o alcance de la acción de amparo constitucional

De acuerdo a lo dispuesto por la Constitución Política del Estado “La Acción de Amparo
Constitucional tendrá lugar contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley” (art. 128), debiendo interponerse
por la persona que se crea afectada o en su caso, por otra a su nombre con poder suficiente o por
la autoridad correspondiente, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados (art. 129 de la CPE).

Esta acción es de naturaleza subsidiaria y extraordinaria; es decir, no forma parte de los recursos
o medios de impugnación ordinarios previstos por la legislación procesal, pudiendo activarse
sólo en caso de haberse agotado los recursos y mecanismo de defensa judicial previstos en la
jurisdicción ordinaria, cuya finalidad primordial es evitar la consumación de una amenaza
latente o la restitución de los derechos fundamentales y garantías constitucionales vulnerados
por persona particular o servidor público.

Si bien la acción de amparo constitucional tiene un amplio espectro de protección, esta


únicamente será viable siempre y cuando no existan otros mecanismos de defensa
extraordinarios y específicos previstos para la defensa de determinados derechos, por cuanto en
caso de existir estas vías idóneas y especiales tendentes a tutelar los derechos invocados,
deberán activarse ellas y no así el amparo constitucional, conforme se analizará a continuación.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 773


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.2. Naturaleza jurídica del recurso directo de nulidad

El art. 79 de la LTC, determina: “Procede el recurso directo de nulidad contra todo acto o
resolución de quien usurpe funciones que no le competen así como contra los actos de quien
ejerza jurisdicción o potestad que no emane de la ley”.

Es un proceso constitucional a través del cual se preserva y resguarda la delimitación de la


jurisdicción y competencia efectuada por la Constitución Política del Estado y las leyes
declarando la nulidad de los actos o resoluciones de las autoridades publicas que incurran en un
exceso de poder, ya sea usurpando funciones, que no le competen o ejerciendo jurisdicción y
competencia que no emane de la ley.

Este mecanismo de defensa, previsto por la Ley Fundamental en su art. 122, determina: “Son
nulos los actos de las personas que usurpen funciones que no les competen, así como los actos
de las que ejercen jurisdicción o potestad que no emane de la ley”, siendo un camino de
protección al Estado de Derecho y de los principios de seguridad jurídica y de legalidad.

“La norma constitucional glosada prevé dos presupuestos jurídicos para que se opere la nulidad
de los actos o resoluciones de las personas: 1) La usurpación de funciones que no le competen,
debiendo entenderse por tal, el ejercicio de una función sin tener titulo o causa legítima; es decir,
el ejercicio ilegítimo por parte de un funcionario o autoridad, de una función que le está
reconocida a otra autoridad o funcionario; o estándole reconocida a él, ya expiró su periodo de
funciones o está suspendido del ejercicio de sus funciones por algún motivo legal; 2) El ejercicio
de jurisdicción o potestad que no le fue designada por la constitución o la ley; debiendo
entenderse, por tal, el que una persona o funcionario asuma una jurisdicción o ejerza una
competencia que no le ha sido asignada por el ordenamiento jurídico; es decir ejerce una función
inexistente” (Rivera Santiváñez, José Antonio, Jurisdicción Constitucional, Procesos
Constitucionales en Bolivia, Ed. Kipus. 2011 Bolivia, p. 303).

Con relación a la protección del elemento del juez natural, componente del derecho y garantía
del debido proceso y el medio eficaz para su protección, la jurisprudencia constitucional
determinó el siguiente entendimiento, que es asumido por este Tribunal: “…el antes recurso de
amparo constitucional, ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección eficaz y
pertinente para el resguardo del derecho al debido proceso en todos sus elementos incluido el
juez natural, pero, solamente en sus elementos imparcialidad e independencia, en ese sentido,
debe precisarse que la protección del tercer componente del juez natural; el referente a la
competencia en cuanto a los supuestos de hecho antes descritos; es decir, usurpación de
funciones que no estén mencionadas por ley, ejercicio de potestad administrativa que no emane
de la ley, resoluciones judiciales emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley o
pronunciadas por autoridad jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus funciones o que
hubieren cesado en las mismas; se encuentran resguardados específicamente por el recurso
directo de nulidad.

Ahora bien, en el ámbito administrativo y municipal concretamente, que son aspectos que
interesan al caso de autos, considerando que el acto administrativo por su naturaleza jurídica
tiene las características de ejecutividad y presunción de legalidad tal como se explicó en el
Fundamento Jurídico, punto III.3 y considerando además que todo acto administrativo tiene
una teleología propia cual es cumplir con los fines del Estado, el constituyente fue sabio al
determinar un mecanismo inmediato e idóneo para proteger efectivamente actos que puedan ser
nulos, pudiendo incluso suspenderse los efectos de los mismos para evitar 'nulidades
consecuentes' que en un Estado Social y Democrático de Derecho serían completamente
adversas y contrarias al interés público; por esta razón y por la importancia del resguardo a la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 774
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

competencia, se establece un mecanismo reforzado y específico para protegerla frente a los


supuestos de hecho antes descritos.

En mérito a todos los aspectos señalados y específicamente en el campo de los actos


administrativos municipales, se colige que el -amparo constitucional- no es la vía idónea para
restituir supuestos de hecho descritos en los art. 31 de la CPEabrg y 122 de la CPE, toda vez
que existe un mecanismo específico para su resguardo cual es el recurso directo de nulidad, por
tanto, pretender hacer valer presuntas vulneraciones a los supuestos de hecho descritos en estas
garantías mediante el antes recurso de amparo constitucional, ahora acción de amparo, lo hace
manifiestamente improcedente, por cuanto se desvirtúa y desnaturaliza la actuación del juez
natural.” (SC 0099/2010-R de 10 de mayo).

En consecuencia, el debido proceso, reconocido constitucionalmente como un derecho y


garantía jurisdiccional al amparo de los arts. 115.II y 117.I de la CPE y como derecho humano
por los arts. 8.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y 14.1 del Pacto
Internacional de Derecho Civiles y Políticos, encuentra protección en si mismo a través que la
tutela a sus diferentes elementos -entre ellos, al juez competente, independiente e imparcial-
mediante los recursos extraordinarios y específicos destinados para el efecto, correspondiendo
su análisis y protección mediante la acción de amparo constitucional, cuando se invoca la
protección del juez independiente e imparcial; y, por el recurso directo de nulidad, tratándose del
elemento juez competente.

III.3. Análisis del caso concreto

De acuerdo a los argumentos expuestos por el accionante se infiere que considera la vulneración
de sus derechos a la “seguridad jurídica” y al trabajo, debido a la emisión del memorando
0214/2009, por el que le agradecieron la prestación de sus servicios como Jefe de Finanzas del
municipio de Challapata, presuntamente expedido sin que el suscribiente, José Llanque Llanque,
Oficial Mayor Administrativo, ostente facultades para asumir dicha determinación, siendo ello
de competencia exclusiva del Alcalde Municipal.

Al respecto, a pesar que el accionante no invocó la protección del derecho al debido proceso, en
su elemento del juez natural competente, restringiéndose sólo a la mención de sus derechos al
trabajo y a la “seguridad jurídica”, habiendo consignado en su petitorio la nulidad del
memorando 0214/2009, entre otras peticiones, mas no que el motivo de la nulidad sea su
expedición por falta de competencia o usurpando funciones, imprecisiones que podrían resultar
confusas; es necesario resaltar que, en el memorial de demanda el claro argumento del actor
estriba en la emisión del memorando cuestionado, a decir suyo, sin competencia; razón por la
cual, concluimos que al estar cuestionada la competencia de José Llanque Llanque, en su
condición de Oficial Mayor, ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada
significaría dilucidar la competencia de un servidor público, a través de la presente acción
tutelar, instrumento de defensa extraordinario ineficaz para dilucidar la usurpación de funciones
no establecidas en la ley; y, el ejercicio de potestad administrativa que no emane de ella.

Conforme a lo desarrollado, el recurso directo de nulidad, como mecanismo de control


normativo es la vía idónea para evitar el abuso o extralimitación de las atribuciones
encomendadas a determinado servidor público; o, en su caso, la usurpación de funciones, la
actuación sin gozar de jurisdicción ni competencia, o teniéndolas evitar el exceso en su ejercicio,
control que de manera indirecta protegerá al juez natural en su elemento competencia, conforme
se estableció en la jurisprudencia constitucional y entendimiento desarrollados en el Fundamento
Jurídico III.2 de este fallo.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 775


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Por lo expuesto precedentemente, se concluye que el Juez de garantías, al haber concedido la


tutela, no ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales ni ha dado
correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de su Sala Liquidadora Transitoria, virtud a lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:

1° REVOCAR la Resolución de 21 de agosto del 2009, pronunciada por el Juez de Partido,


Sentencia, del Trabajo, Seguridad Social y Niñez y Adolescencia del Distrito Judicial de Oruro;
y, en consecuencia, DENEGAR el amparo solicitado, con la aclaración que no se ingresó al
análisis de fondo de la problemática planteada.

2° En aplicación del art. 48.4 de la LTC, se mantienen los efectos de la concesión


pronunciada por el Tribunal de garantías, con la finalidad de evitar perjuicios a terceras
personas.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi .-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0062/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20480-41-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución 14/09 de "13 de mayo", cursante de fs. 471 a 474 y vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Jorge Vidal Claros y Néstor
Lamas Montan en representación de la Asociación Mixta de Transportes de la Línea "Ñ"
contra Tatiana Rojas Fernández, Edwin Mallon Avalos, Paulina Pinto Gonzales, Johnny
Antezana Martínez, Mónica Gamarra Giese, Vivian Cardona de Tomicic, Roberto
Requena Urioste, Javier Cremer Torrico, Gonzalo Lema Vargas, Clemencia Orellana Vela
y Víctor Calderón Cruz, miembros del Concejo Municipal de la Provincia Cercado; Carlos
Martínez Gutiérrez, Rubén Copa Morató, José Luis Flores Colquillo, miembros de la
federación del transporte libre; Oscar Zelada Carvajal, Gilma Solís, Samuel Méndez
Rivera, miembros del Federación de Juntas Vecinales; Ramiro Terrazas A., Ramiro Cuba
Díaz, oficiales de la Policía; Isacc Maldonado, Carlos Valdivieso, Mauricio Camacho, Juan
Carlos Guzmán, David Rivera Rivas y Pedro Meruvia Cabrera, funcionarios de la
Alcaldía Municipal; Alberto Orozco, Daniel Torres, Emilio Peña, Gumercindo Fuentes y
Javier Santibáñez, miembros del Comité de Transportes.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 776
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Los accionantes por memorial de fs. 126 a 134 y vta., de 21 de febrero y adecuación de fs. 156 a
157 de 21 de marzo, ambos de 2009, manifiestan que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La Ordenanza Municipal (OM) 3825 de 26 de agosto del 2008 emitida por el Concejo Municipal
de la provincia Cercado del departamento de Cochabamba, en aplicación del art. 107 y 108 del
Reglamento Municipal para el Servicio de Transporte Público de Pasajeros, aprobado por la OM
2998/03 de 10 de abril de 2003 (fs. 96-122), dispuso "la sanción de caducidad para la línea Ñ",
que resulta lesiva, por ser inconstitucional, porque desconoce normas procedimentales de orden
constitucional y administrativo, pese a que la personería de la Asociación Mixta de Transportes
de la línea "Ñ" se halla reconocida por la Resolución Prefectural 03/01 de 9 de enero de 2001,
contando asimismo con estatutos y reglamentos debidamente aprobados y testimoniados bajo
escritura pública 837/01 de 2 de julio de 2001, cursante de fs. 5 a 14. Asimismo, afirma que en
fecha 25 de octubre del 2002, suscribieron un primer convenio entre el Sindicato Mixto de
Transportistas Línea 7 "Nuestra Señora de Urkupiña" y miembros de la Línea "Ñ" mediante
Acta de asamblea extraordinaria de 22 de septiembre del 2005 (fs.24), que determina la
afiliación de esta última Línea con la primera; a raíz de ello, los accionantes en el mes de marzo
del 2007, en cumplimiento del art. 8.V.6 de la Ley de Municipalidades (LM) amparados en la
OM 3302/04 de 26 de noviembre de 2004 que autorizaba el recorrido de la línea "Ñ", iniciaron
el trámite de autorización por ante la Superintendencia de Transporte; empero, el Comité de
Transportes mediante Resolución 03/2008 de 10 de abril, pidió se inicie el procedimiento de
revocatoria para la Línea "Ñ", por infracción, caducidad y abandono del servicio, motivando que
los accionantes presenten el primer recurso indirecto incidental de inconstitucionalidad en contra
de la OM 2998/03, respondido por oficio de 24 de julio de 2008 "Ref: Devuelve memorial de;
17 de julio de 2008" (sic) con el argumento de que el Comité de Transportes no tiene calidad de
autoridad administrativa, y que solo emite sugerencias y la Resolución 03/08 es una simple
sugerencia ante el Concejo Municipal de Cercado, que no es de cumplimiento obligatorio,
sugiriendo finalmente que el recurso se presente ante la autoridad administrativa competente, lo
que constituye un desconocimiento del art. 93 de la OM 2998/2003.

Es así, que con el propósito de hacer entender su petitorio presentaron (ante el Concejo del
Gobierno Municipal de Cochabamba) un segundo recurso indirecto incidental de
inconstitucionalidad contra la OM 2998/2003, que fue respondido de la siguiente manera
"…devolver el recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad (…) por cual uno de los
requisitos esenciales para la admisión del recurso (…), es la acreditación de la legitimación…"
(sic).

Señalan que no obstante lo referido, por memorial de 11 de septiembre del 2008, solicitaron la
RECONSIDERACION de la OM 3825, antes de la ejecutoria de la Ordenanza Municipal cuya
providencia de respuesta se hizo conocer en noviembre del 2008.

Finalmente en fecha 12 de septiembre del mismo año, presentaron un tercer recurso


indirecto o incidental de inconstitucionalidad de la OM 2998/2003, q ue mereció la
Resolución Municipal 5108/2008 de 7 de octubre rechazando el recurso, remitiendo
antecedentes en el efecto suspensivo ante el Tribunal Constitucional y manteniendo
pendiente la resolución de la solicitud de Reconsideración; consecuentemente, la OM 3825
no está ejecutoriada por estar aún pendiente la solicitud presentada, tal cual se infiere de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 777
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Resolución Municipal 5108/2008, como consecuencia de ello, "tanto la Alcaldía Municipal


a través del Departamento de Tráfico y Vialidad y el Organismo Operativo de Tránsito NO
NOS PERMITEN TRABAJAR. Este es el vía crucis que hemos pasado con vulneraciones a
nuestros derechos en cada momento del trámite..." (sic).

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Los accionantes, sostienen que se les han vulnerado sus derechos al trabajo, a la "seguridad
jurídica", a la libre asociación, a la defensa, al debido proceso, a la petición y a la igualdad,
conforme los arts. 46, 52.I, 115.II y 24 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Los accionantes solicitan se conceda la tutela y en consecuencia se disponga: a) Se deje sin


efecto la OM 3825/2008 que dispone la caducidad de la línea "Ñ" y demás actuaciones que
dieron lugar a dicha Ordenanza; b) Se imprima el trámite correspondiente al recurso incidental
de inconstitucionalidad de la OM 2989/2003, con daños y perjuicios; y, c) Asimismo, solicitan
se disponga que Tráfico y Vialidad y el Organismo Operativo de Tránsito, se abstengan de
interferir en su trabajo.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 8 de junio de 2009, según consta en acta cursante de fs. 302 a
307, los demandados mediante sus representantes legales, antes de ingresar a las cuestiones de
fondo, solicitaron se resuelva el memorial de excusa contra el Presidente del Tribunal de
garantías (fs. 235-237), formulada por el Concejo Municipal de Cochabamba, representado por
Walter Rocha Anna y Carlos Alberto Burgos Gutiérrez, el mismo que fue aceptado por el propio
Tribunal; empero en revisión, la Sala Penal Tercera mediante Resolución de 22 de abril de 2009
(fs. 243 y vta.), declaró ilegal la excusa, devolviendo obrados a la Sala de origen. En
consecuencia, el Tribunal de garantías en fecha 13 de mayo de 2009 (fs. 272-277), volvió a
instalar audiencia de acción de amparo en la que se observó la legitimación pasiva y activa,
disponiéndose que antes de ingresar al fondo de la acción, se subsanen estos extremos;
consiguientemente, subsanado lo observado con la presentación de los poderes respectivos, en
fecha 8 de junio del 2009 (fs. 302-307) se prosiguió con la audiencia de acción de amparo
constitucional, en la que se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Los abogados de la parte accionante ratificaron la acción presentada, reiterando se conceda la


tutela.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los demandados Tatiana Rojas Fernández, Presidenta del Concejo Municipal de Cochabamba,
Edwin Mallon Avalos, Clemencia Orellana Vega, Paulina Ana Pinto Gonzales, Rita Vivian
Cardona Sossi de Tomicic, Roberto Carlos Walter Requena Urioste, Víctor Calderón Cruz,
Mónica Gamarra Giese; Gonzalo Eberto Lema Vargas y Jhonny Sergio Antezana Martínez,
mediante sus representantes legales Walter Rocha Anna y Carlos Alberto Burgos Gutiérrez,
presentaron informe escrito, cursante de fs. 317 a 323 vta., manifestando que: 1) Los accionantes
interpusieron con anterioridad otro amparo constitucional, con las mismas características, por lo
que ésta, debió ser rechazada in límine, observando que se aclare también la existencia de
terceros interesados en la acción deducida, para luego entrar en el fondo del informe, haciendo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 778
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

mención al principio de subsidiariedad, como base de fundamento de improcedencia del recurso


planteado en su contra, por tener el propio Honorable Concejo Municipal de Cochabamba,
pendiente de resolución la solicitud de reconsideración (acorde al art. 22 de la LM) presentado
por Marlon Freddy Zambrana Torrico, en representación de la Asociación Mixta de Transportes
línea "Ñ", en contra de la OM 3825/2008 que declara la caducidad de la mencionada Línea; 2)
En fecha 12 de septiembre de 2008, el representante de la Asociación Mixta de Transportes
Línea "Ñ", promovió el recurso indirecto incidental de inconstitucionalidad contra la OM
2998/2003, que aprobó el Reglamento Municipal para el Transporte Público de Pasajeros en la
Jurisdicción de la Provincia Cercado del Departamento de Cochabamba, que esencialmente fue
aplicado para dictar la OM 3825/2008; 3) Mediante Resolución Municipal 5108/2008 de fecha 7
de octubre, se rechazó el Recurso Indirecto de Inconstitucionalidad contra la OM 2998/2003,
interpuesto por el representante de la Asociación Mixta de Transporte Línea "Ñ", por no
adecuarse a las previsiones contenidas en el art. 59 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC),
disponiendo además, en su artículo segundo, remitir los antecedentes en el efecto suspensivo
ante el Tribunal Constitucional, manteniendo pendiente la resolución de la solicitud de
reconsideración, hasta conocer el resultado de la consulta, en aplicación de lo establecido por el
art. 96. 1 de la LTC, que dispone que el Amparo Constitucional, no procede contra las
resoluciones cuya ejecución estuviere suspendida por el efecto de algún medio de defensa o
recurso ordinario o extraordinario interpuesto con anterioridad; 4) Al mismo tiempo asumen la
legalidad y constitucionalidad de la OM 2998/2003, que aprobó el Reglamento Municipal para
el Servicio de Transporte Público de Pasajeros en la Jurisdicción de Cercado, por lo que la OM
3825/2008, que aplicó la sanción de caducidad de las Líneas "Ñ" y "137" también sería legal; 5)
Por otro lado se hace mención sobre, las competencias municipales formando, la Autonomía
Municipal, Potestad Normativa, ejecutiva, Administrativa, y Técnica en el ámbito de su
Jurisdicción y competencia Territorial.

Los demandados miembros del Comité de Transportes de la Alcaldía Municipal de Cercado, por
memorial de fs. 441 a 444, Juan Carlos Guzmán, Mauricio Camacho Rocha, David Rivera
Rivas, Daniel Torres Rojas, Gumercindo Fuentes Morales, Emilio Peña Salazar, Isaac
Maldonado Sanabria, Javier Santibáñez Camacho, Rubén Copa Morató y Gilma Soliz,
informaron que en merito al documento público de fusión, acta de reunión de 11 de abril,
memorial de 21 de abril, carta de 18 de junio, todos del 2008, certificado emitido por la
Federación Especial de Transporte Libre de Cochabamba, certificado emitido de la Central de
Transportistas de Quillacollo y certificado de la Federación Sindical del Auto Transporte
Cochabamba, los accionantes son representantes del Sindicato Mixto de Transportistas Línea 7
"Nuestra Señora de Urkupiña" y no así de la Asociación Mixta de Auto Transporte Línea "Ñ",
por consiguiente, concluyen que el accionante no acreditó la personería, solicitando en
consecuencia se declare improcedente la acción presentada.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Segunda constituida en Tribunal de garantías, por Resolución 14/09 de "13 de
mayo de 2009" cursante de fs. 471 a 474, denegó la tutela demandada y declaró
"improcedente" el amparo constitucional, ordenando a la Unidad Operativa de Transito y la
Municipalidad de Cercado, evitar obstaculizar el libre desempeño del Servicio de Transporte de
la Línea "Ñ" (medida cautelar que fue dispuesta en el Auto de admisión de la acción de fs. 158),
todo esto, de acuerdo a los siguientes fundamentos: i) El recurso indirecto o incidental de
inconstitucionalidad, se encuentra regido por el art. 59 y ss. de la LTC, como vía de control
constitucional y procederá en procesos judiciales o administrativos, cuya decisión dependa de la
Constitucionalidad o Inconstitucionalidad de una Ley, tratándose de una vía que resguarda el
Estado de Derecho y el principio de Supremacía Constitucional, además de proteger los
derechos fundamentales de la personas, contra las disposiciones legales que en su contenido o en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 779
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

su aplicación concreta podrían ser vulnerados; ii) Los accionantes al plantear el incidente por
tercera vez contra la OM 2998/2003, otorgaron consentimiento a las observaciones de los
anteriores incidentes, viabilizando el tramite de este último, que fue rechazado por la autoridad
"recurrida" mediante Resolución Municipal 5108/2008, ordenando la remisión en el efecto
suspensivo ante el Tribunal Constitucional, cumpliendo con el art. 62 de la LTC; iii) La solicitud
de reconsideración presentada por el accionante el 12 de septiembre de 2008 amparándose en el
art. 22 de la LM, se encontraría en suspenso, mismo que en el fondo versa sobre la ilegalidad de
las Ordenanzas Municipales sustentadas en la OM 2998/2003. Por consiguiente, la jurisdicción
constitucional, no puede operar como mecanismo de protección paralelo a los medios de
impugnación judicial o administrativo.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. La Asociación Mixta de Transportes Línea "Ñ" mediante Resolución Municipal 3302/04
obtuvo la aprobación del tramo vial del Micro Línea "Ñ", con un recorrido de ida de Capacachi
hasta el barrio Fabril y recorrido de retorno Plaza Dr. Fernando Siles Parada hasta barrio Fabril
(Capacachi-Parada) (fs. 23).

II.2. Dicha Resolución Municipal fue revocada y con ello el tramo vial de la Línea "Ñ",
mediante OM 3825/2008 del Concejo Municipal de Cercado (fs. 50-55), que en aplicación de la
OM 2998/2003, dispuso la sanción de caducidad de la Línea "Ñ", por incumplimiento del
Reglamento Municipal para el Servicio de Transporte Público de Pasajeros contenido en la
Resolución 03/2008 (fs.30-32).

II.3. Al respecto el accionante presentó los siguientes recursos:

a) El primero fue presentado el 18 de julio de 2008, por Jorge Vidal Claros, Secretario General y
Néstor Lamas Montaño, Secretario de Relaciones, ambos del Sindicato de Transportistas Línea
7 "Nuestra Señora de Urkupíña", ante el Comité de Transportes del Municipio de Cercado,
solicitando se promueva recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad de la OM
2998/2003, que aprobó el Reglamento Municipal para el Servicio de Transporte Público de
Pasajeros, aprobada el 10 de abril del 2003, mismo que fue devuelto por el citado Comité (fs.33-
36).

b) El segundo, presentado el 26 de julio de 2008, ante el Concejo Municipal de Cochabamba,


solicitando se promueva recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad de la OM
2998/2003, recurso que también fue devuelto, esta vez por el citado Concejo (fs. 39-43).

c) Después, ante el Pleno del Concejo Municipal, fue presentada la solicitud de reconsideración
(fs.56-58) de 11 de septiembre de 2008, por Marlon Freddy Zambrana Torrico, en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 780
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

representación legal de los Operadores, Fundadores y Socios de la Línea "Ñ", actual Asociación
Mixta de Transportes Línea "Ñ", contra la OM 3825/2008, solicitando su revocatoria y pidiendo
que en consecuencia, se mantenga vigente la autorización de la Línea "Ñ". Mediante nota PRE
1761/08 de 16 de octubre, la Presidenta del Concejo Municipal, Tatiana Rojas Fernández, puso a
conocimiento de la Asociación Mixta de Transporte Línea "Ñ", la comunicación interna 540/08
de 16 de octubre de 2008 y 553/2008 de 9 de octubre; en esta última, el Director Jurídico a.i. del
Consejo Municipal Walter Rocha Anna, recomienda seguir con el trámite de reconsideración
planteado.

d) El Tercero, fue presentado el 12 de septiembre de 2008, por Marlon Freddy Zambrana


Torrico en representación legal de los operadores, fundadores y socios de la Línea "Ñ", contra la
OM 2998/2003, ante el Concejo Municipal (fs. 62-66). Al respecto, se emitió la Resolución
Municipal 5108/2008, que rechaza este recurso por no adecuarse a las previsiones contenidas en
el art. 59 de la LTC., disponiendo a la vez remitir antecedentes en el efecto suspensivo ante el
Tribunal Constitucional, además de mantener pendiente la resolución de la solicitud de
reconsideración antes planteado (fs. 67-69).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes en representación de la Asociación de Transportes de la Línea "Ñ", reclaman la


vulneración de sus derechos al trabajo, a la "seguridad jurídica", libre asociación, defensa,
debido proceso y a la petición e igualdad, por cuanto la OM 3825/2008, emitida por el Concejo
Municipal, dispuso se aplique la sanción de caducidad de la Línea "Ñ" y "137". Es así, que
solicitaron la reconsideración de esa Ordenanza, además de interponer un tercer recurso
indirecto incidental de inconstitucionalidad contra la OM 2998/2003, en virtud del cual, el
Concejo Municipal lo rechazó mediante RM 5108/2008, disponiendo remitir antecedentes en el
efecto suspensivo al Tribunal Constitucional, dejando indebidamente pendiente la
reconsideración planteada. En consecuencia, corresponde determinar en revisión, si los extremos
demandados son evidentes para conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es una acción tutelar de carácter extraordinario, cuya


finalidad es la protección de los derechos fundamentales de las personas, establecida en el art.
128 de la CPE, y procede: "…contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley".

A su vez, el art. 129 de la Ley Fundamental, establece que: "I. La Acción de Amparo
Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con
poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante
cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la
protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados. II. La
Acción de Amparo Constitucional podrá interponerse en el plazo máximo de seis meses,
computable a partir de la comisión de la vulneración alegada o de notificada la última decisión
administrativa o judicial".

III.2. Efectos del trámite del recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad

En el caso de autos, con carácter previo a su análisis, es menester, referirse a los efectos del
trámite del recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad que se encuentra previsto en
el art. 59 al 67 de la LTC. Es así, que el art. 63 señala: "La admisión del recurso indirecto o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 781
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

incidental de inconstitucionalidad no suspenderá la tramitación del proceso, el mismo que


continuará hasta el estado de pronunciarse sentencia o resolución final que corresponda,
mientras se pronuncie el Tribunal Constitucional."

Al respecto, se asume el entendimiento expresado en la SC 0635/2011-R de 3 de mayo, toda vez


que la misma no contraviene el orden Constitucional vigente, al señalar:"…el AC 0321/2010-CA
de 14 de junio, referente a la solicitud de promover incidente de inconstitucionalidad, indica
que: 'Dada la naturaleza jurídica de la acción de inconstitucionalidad, y por expresa previsión
legal, el rechazo de la solicitud de parte del recurso incidental de inconstitucionalidad, no
suspende el proceso judicial o administrativo, ni impide la dictación de la resolución o
sentencia.

Si el Tribunal Constitucional a través de la Comisión de Admisión revoca el rechazo y admite el


recurso incidental de inconstitucionalidad, debe notificar a la autoridad consultante, a objeto
de que aplique lo dispuesto por el art. 63 de la LTC, es decir, la prosecución del proceso, hasta
el estado de pronunciarse sentencia o resolución final, si es que la misma no ha sido dictada.

En los casos en que durante el periodo de tiempo entre la remisión de la consulta y la


emisión del auto constitucional por parte de la Comisión de Admisión por el que se revoca
y admite el recurso incidental, ya se hubiese dictado la sentencia o resolución, la misma no
puede ser anulada por la sola admisión por parte de la Comisión de Admisión, sino hasta
que el Pleno del Tribunal Constitucional se pronuncie sobre el fondo, dado que la
declaratoria de inconstitucionalidad, dimensionando el efecto -art. 48.4 de la LTC-, puede
inclusive, dejar sin efecto la sentencia o resolución ya dictada; en cambio, en caso de
declararse la constitucionalidad, no tendría mayor trascendencia ni afectación al caso
concreto, pues no altera el contenido de la sentencia, razón por la cual debe permanecer
válida, ese es el fundamento básico del por qué no se puede generalizar el efecto del
rechazo, evitando anular resoluciones, innecesariamente, atentando contra los principios
de legalidad, celeridad y seguridad jurídica -entre otros-, como ya se tiene
abundantemente explicado.

Por tanto, las autoridades tanto jurisdiccionales como administrativas, ante el rechazo de
esta acción incidental, deben continuar y proseguir con el normal desarrollo de los procesos,
entre tanto el Tribunal Constitucional no se pronuncie como se tiene explicado
precedentemente."

III.3. Recurso de reconsideración, mecanismo procesal administrativo como medio de


impugnación de ordenanzas y resoluciones municipales

En la vía administrativa, la reconsideración, es un medio legal impugnativo en contra de


resoluciones y ordenanzas emitidas por la Institución Municipal, que permite a esta entidad
revaluar y/o reencauzar la decisión tomada en acto administrativo de acuerdo al art. 22 de la
LM, de manera deliberante. En ese sentido asumiendo igualmente el entendimiento de la SC
0512/2010-R de 5 de julio, por no ser contraria al orden constitucional vigente, respecto a la
reconsideración señala: "… en los casos en que en el ámbito municipal, no es posible la
interposición de los recursos de revocatoria y jerárquico, porque el acto que se considera lesivo
de derechos es emanado directamente del Concejo Municipal, o quien se crea agraviado tiene
el deber y responsabilidad de hacer uso de la reconsideración, de tal manera que estas
autoridades o ente municipal, tenga la posibilidad de efectuar un nuevo análisis y reconsidere
la decisión asumida, y sólo agotado dicho medio impugnativo, si persiste la lesión a derechos
fundamentales puede acudir a la acción de amparo constitucional"

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 782


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.4. Sobre el caso concreto

De los antecedentes procesales se constata que mediante OM 3825/2008, el Concejo Municipal,


dispone la sanción de caducidad de las Líneas "Ñ" y "137", en aplicación de la OM 2998/2003,
que reglamenta el Servicio de Transporte Público de Pasajeros signada.

En contra de dicha OM, la Asociación Mixta de Transporte Línea "Ñ", solicitó la


reconsideración de 11 de septiembre de 2008, de acuerdo al art. 22 de la LM. Posteriormente, la
parte ahora accionante, presentó un tercer recurso indirecto de inconstitucionalidad contra la OM
2998/2003, mismo que fue rechazado por Resolución Municipal 5108/2008 (fs. 67-69),
disponiendo remitir antecedentes en el efecto suspensivo al Tribunal Constitucional, y mantener
pendiente la resolución de la solicitud de reconsideración planteada, actuando incorrectamente,
por cuanto el ente deliberante no debió imprimirle al trámite el efecto suspensivo, omitiendo dar
cumplimiento a lo previsto por el art. 62.1 de la LTC, que establece: "Rechazando el incidente si
lo encuentra manifiestamente infundado, en cuyo caso proseguirá la tramitación de la causa…".
En el caso en análisis, debió pronunciarse sobre la reconsideración y no postergarla
indebidamente hasta la resolución del Tribunal Constitucional.

Al haber actuado de esa manera, el Concejo Municipal, vulneró el derecho a la petición de los
accionantes, quienes se vieron perjudicados por la omisión en la que incurrió el ente municipal,
único aspecto por el que se concede la tutela solicitada, aclarando que no se ha ingresado al
fondo de la problemática planteada, al constatar la omisión señalada, por lo cual este Tribunal
tampoco se pronunciará respecto a la petición de los accionantes de que se disponga la
tramitación del RII, por corresponder ese reclamo dentro del mismo recurso constitucional
citado, y sobre los otros aspectos denunciados y derechos invocados como vulnerados,
circunstancia por la que tampoco se ha analizado la actuación de los codemandados,
correspondiendo, denegar la acción respecto a ellos, reiterando que la tutela se la otorga solo por
la omisión en el pronunciamiento de la reconsideración solicitada en la que incurrió el Concejo
Municipal.

En consecuencia, la problemática planteada se encuentra dentro de las previsiones del art. 128
de la CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al haber declarado "improcedente" el recurso de
amparo constitucional -ahora acción de amparo constitucional-, aunque en uso de la
terminología correcta debió denegarla, ha efectuado una compulsa parcial de los antecedentes
procesales.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:

1° REVOCAR en parte la Resolución 14/09 de 13 de Mayo, cursante 471 a 474, dictada por la
Sala Penal Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial-ahora Tribunal Departamental de
Justicia- de Cochabamba; y en consecuencia CONCEDER la tutela solicitada, únicamente
respecto a la actuación omisiva del Concejo Municipal

2º Disponer, que el ente deliberante se pronuncie sobre la reconsideración presentada; salvo que
por el tiempo transcurrido entre la presentación de la acción de amparo constitucional y su
resolución, ya se hubiere definido la situación de los accionantes, así como la medida cautelar
dispuesta en el Auto de Admisión de la presente acción tutelar.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 783


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

3º DENEGAR la tutela con relación a los otros codemandados miembros de la Federación del
Transporte Libre; miembros del Federación de Juntas Vecinales, funcionarios de la Alcaldía
Municipal y miembros del Comité de Transportes.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi .-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez .-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco .-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0064/2012


Sucre, 9 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20401-41-AAC
Distrito: Cochabamba

En revisión la Resolución de 26 de agosto de 2009, cursante de fs. 260 a 263 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Pablo Gutiérrez Gutiérrez
contra Juvenal Huari Udaeta, Juez Primero de Partido en lo Civil y Comercial de
Quillacollo; y, Silvia Balderrama Siles, Jueza de Instrucción de Sipe Sipe, ambos del
Distrito Judicial de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante, mediante memorial presentado el 29 de mayo de 2008, cursante de fs. 170 a 172
vta. y subsanado por escrito de 2 de junio de igual año, corriente a fs. 179, alegó lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso interdicto de adquirir la posesión incoado por Mercedes, Juana, Gladis y
Humberto Vargas Román, respecto a un lote de terreno, adquirido mediante compra de sus
anteriores propietarios, Ángel Castro Dávila y Sonia Cordero de Castro, según registro de
Derechos Reales (DD.RR.) "a Fs. y Ptda No. 1242", del Libro Primero de Propiedad de la
provincia de Quillacollo, de 4 de mayo de 1989; es así que, la Jueza de Instrucción de Sipe Sipe,
mediante Sentencia de 20 de marzo de 2007, declaró probada la demanda e improbada la
oposición planteada por su parte, fundando su Resolución en el art. 596 del Código de
Procedimiento Civil (CPC), argumentando además que los demandantes, habrían cumplido con
el pago de impuestos e inscripción catastral de la propiedad inmueble, suscribiendo un
documento de cesión de una fracción del terreno a favor de Guillermina Guzmán Zubieta, en
reconocimiento a sus labores de cuidado, además, que aquellos, efectuaron el pago de cuotas
mensuales desde 1989, "por la inscripción del pozo de Collpapampa a la respectiva OTB de la
zona" (sic), actuaciones que demuestran su derecho propietario.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 784
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Añade que, no obstante, haber acreditado su derecho propietario exhibiendo su Título


Ejecutorial, la Jueza de Instrucción, aclaró que no se discutía el derecho propietario, en tal
sentido resultaba innecesario considerar la validez de los documentos acompañados,
fundamentando su criterio en el referido artículo que dispone que "el Interdicto de Adquirir la
Posesión procederá cuando quien la solicitare presente título auténtico de dominio sobre la cosa
y ésta no se hallare en poder de un tercero con título de dueño o usufructuario" (sic), ante este
fallo, el 23 de marzo de 2007, interpuso recurso de apelación solicitando nulidad por falta de
competencia en razón de materia, señalando que, de acuerdo a certificación extendida por el
gobierno municipal de Quillacollo, la propiedad objeto del litigio se encontraba en área de futura
expansión poblacional; es decir, fuera del radio urbano y que, de conformidad a los arts. 30 y 39
numerales 5 y 7 de la Ley del Servicio Nacional de Reforma Agraria (LSNRA), los conflictos
emergentes de la posesión del derecho propietario de propiedad agraria, se encuentran sometidos
a la jurisdicción agraria en virtud del principio de especialidad, citando al efecto la SC
0632/2003-R de 25 de marzo; sin embargo, el Juez Primero de Partido en lo Civil y Comercial
de Quillacollo, a través del Auto de Vista de 28 de marzo de 2008, al haber suscitado oposición
a la demanda en vez de plantear excepción de incompetencia por razón de materia, habría
aceptado la competencia de los Tribunales ordinarios y que además en el lugar en el que se halla
el inmueble "existen viviendas de lujo que no son agrarias", suponiendo, sin respaldo jurídico
alguno que, por tal hecho la zona en la que se encuentra el lote, está dentro del área urbana.

I.1.2. Garantías supuestamente vulneradas

El accionante, señala como vulneradas las garantías al debido proceso, "la seguridad jurídica", al
juez natural y a la fundamentación de las resoluciones judiciales, citando al efecto los arts. 16.IV
y 116.II de la Constitución Política del Estado abrogada (CPEabrg), y 115.II de la Constitución
Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se admita "el recurso", declarándose nulo e ilegal el Auto de Vista de 28 de marzo de
2008, disponiéndose que el Juez Primero de Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo dicte
nueva resolución en observancia de la jurisprudencia constitucional y la emanada de la Corte
Suprema de Justicia, en base a normas jurídicas positivas.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 26 de agosto de 2009, según consta del acta cursante de fs. 258
a 259, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, ratificó los términos de la acción planteada en todos sus
términos y en uso de su derecho a la réplica, manifestó: a) El Juez de garantías mediante
providencia de 30 de junio de 2009, había dispuesto se aclaren los domicilios de los
demandados, Resolución que habilita al juez de amparo conocer el recurso; y, b) Por disposición
de los arts. 30 y 39 de la LSNRA, son los jueces agrarios quienes están facultados para conocer
asuntos de ésa materia.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El Juez Primero de Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo, Juvenal Huari Udaeta,


mediante informe escrito cursante a fs. 257 y vta., y en audiencia, señaló que el accionante no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 785
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

acreditó su legitimación activa conforme dispone el art. 97.I de la Ley del Tribunal
Constitucional (LTC), y que tampoco, observó la jurisprudencia contenida en la SC 0444/2006-
R de 10 de mayo, referida al carácter de inmediatez de la acción incoada, toda vez que la acción
de amparo constitucional fue interpuesta el 29 de mayo de 2008, habiendo transcurrido hasta la
fecha de audiencia más de un año y dos meses, lapso de tiempo que el accionante, por
negligencia y poco interés, ha demorado en citar a los demandados, correspondiendo en
consecuencia, declarar la improcedencia de la acción.

En uso del derecho a la dúplica, la autoridad demandada, hizo hincapié en los argumentos
expuestos, señalando que el accionante no planteó excepción de incompetencia dentro del
proceso interdictal, emitiéndose la Resolución correspondiente, debidamente respaldada en
normas legales y jurisprudencia constitucional, habiendo ceñido su accionar a lo dispuesto por el
art. 236 CPC, que determina que en apelación, los jueces deben ajustar su accionar a los puntos
reclamados por el apelante y que el ahora accionante, no apeló la Resolución que ahora
impugna, sino más bien solicitó nulidad de obrados; por otra parte, citando la SC 0378/2006-R
de 18 de abril, manifestó que los jueces se encuentran facultados para constituirse en el lugar
con la finalidad de determinar "si el inmueble cuenta con servicios básicos, si se hala poblado y
otros, a fin de establecer su competencia" (sic).

Silvia Balderrama Siles, en su calidad de ex Jueza de Instrucción Mixta de Sipe Sipe, no


presentó informe y tampoco se hizo presente en audiencia, pese a su legal citación.

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

Mediante memorial corriente de fs. 238 a 239, Juana, Gladys, Mercedes y Humberto Vargas
Román, indicaron lo siguiente: 1) En su condición de legítimos propietarios, se encuentran en
posesión continua, pacifica e ininterrumpida por más de dieciocho años, del lote de terreno
ubicado en Huarapuma, jurisdicción de Sipe Sipe, Segunda Sección de la provincia de
Quillacollo, conforme acreditan el título de propiedad legalmente registrado, los hechos
expuestos y reconocidos por parte del opositor; 2) La Resolución dictada en primera instancia,
como el fallo pronunciado por el ad quem se adecua a todas las pruebas acompañadas; 3) De la
revisión de obrados se evidencia claramente que la fecha de interposición del recurso de amparo
constitucional data del 29 de de mayo de 2008, considerando su apersonamiento conforme a ley,
transcurrió más de un año, provocando la irresponsabilidad del accionante; y, 4) Tomando en
cuenta el principio de inmediatez, no se cumplió con lo ordenado.

I.2.4. Resolución

Mediante Resolución de 26 de agosto de 2009, cursante de fs. 260 a 263 vta., el Juez Segundo
de Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo, constituido en Juez de garantías, declaró
"improcedente" la acción, con el siguiente fundamento: i) De la admisión del "recurso" a la
citación de los "recurridos", transcurrió cerca de quince meses, hecho no admitido por ley; ii) La
línea jurisprudencial desarrollada (AC "51-07-RCA" de 14 de febrero) señala que el amparo
constitucional debe presentarse dentro de los seis meses, menos aún se puede esperar que se
tarde cerca de quince meses en citar a los demandados; y, iii) En mérito al análisis realizado en
sujeción a la SC 1191/2005-R de 29 de septiembre, encontrándose el proceso dentro las causales
de improcedencia, no se ingresó al análisis de fondo del "recurso".

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 786
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de


la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose Resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se


establece lo siguiente:

II.1. Por memorial de 21 de abril de 2006, Mercedes, Juana, Gladys y Humberto Vargas Román,
solicitaron posesión judicial de un bien inmueble -lote de terreno- situado en la zona
denominada "Huarapuma en la avenida Simón Bolivar comprensión de Sipe Sipe, segunda
sección de la provincia de Quillacollo" (sic) (fs. 15 a 16).

II.2. Mediante Auto de 6 de junio de 2006 la Jueza de Instrucción de Sipe Sipe, admitió la
demanda de interdicto de adquirir la posesión, disponiendo "la notificación de vecinos,
circunvecinos y actuales poseedores si los hubiera" (sic) (fs. 19 vta.).

II.3. Pablo Gutiérrez Gutiérrez, ahora accionante, mediante memorial de 16 de junio de 2006,
suscitó oposición a la solicitud planteada por Mercedes, Juana, Gladys y Humberto Vargas
Román, manifestando que éstos, en todo momento tuvieron conocimiento de que su persona "es
legítima propietaria y actual poseedor del lote de terreno" (sic), en definitiva solicitando la
suspensión de la audiencia señalada al efecto (fs. 30 y vta.), petitorio al cual el Juez de la causa,
mediante Auto de 17 de ese mes y año, dispuso la apertura de término probatorio de ocho días
conforme establece el Código de Procedimiento Civil (fs. 31).

II.4. La Jueza de Instrucción de Sipe Sipe, por Sentencia de 20 de marzo de 2007, declaró
probada la demanda e improbada la oposición formulada, manteniendo la posesión solicitada (fs.
109 a 111).

II.5. Mediante memorial presentado por Pablo Gutiérrez Gutiérrez, el 24 de marzo de 2007, se
formuló recurso de apelación contra la Sentencia de 20 del citado mes y año; y, acusó nulidad
por falta de jurisdicción por razón de materia (fs. 117 a 119 vta.); por lo que el Juez Primero de
Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo, mediante Auto de Vista de 28 de marzo de 2008,
confirmó la misma, con costas en ambas instancias (fs. 148 a 149 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, alega la vulneración de sus garantías al debido proceso, a la "seguridad jurídica",


al juez natural y a la fundamentación de las resoluciones judiciales, por cuanto dictada la
Sentencia en primera instancia dentro el proceso interdicto de adquirir la posesión intentada por
Mercedes, Juana, Gladys y Humberto Vargas Román, interpuso recurso de apelación contra la
misma, solicitando nulidad por falta de competencia en razón de materia; pues, los conflictos
emergentes de la posesión de derecho propietario de propiedad agraria, se encuentran sometidos
a la jurisdicción agraria en virtud del principio de especialidad; sin embargo, el Juez Primero de
Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo, mediante Auto de Vista de 28 de marzo de 2008,
consideró que al haber suscitado oposición a la demanda en lugar de plantear excepción de
incompetencia por razón de materia, habría aceptado la competencia de los Tribunales
ordinarios. Por lo que corresponde analizar, si en el presente caso, se debe conceder o denegar la
tutela solicitada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 787


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.1. La acción de amparo constitucional y su naturaleza jurídica

El art. 128 de la CPE, ha previsto la acción de amparo constitucional, contra todos los actos u
omisiones ilegales o indebidos cometidos por servidores públicos o persona particular o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Norma Fundamental y las leyes, constituyendo una garantía jurisdiccional extraordinaria
mediante la cual el accionante hace posible la restitución de sus derechos y garantías
fundamentales restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión, obteniendo la
tutela y la reposición en el ejercicio de los mismos; así mismo, el art. 129.I de la Ley
Fundamental, prevé que esta acción de defensa se interpondrá por la persona que se crea
afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de
acuerdo con la Constitución Política del Estao, ante cualquier juez o tribunal competente,
siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados.

Se debe dejar claramente establecido que, respecto a su naturaleza no subsidiaria, la acción de


amparo constitucional no es un instrumento alternativo o sustitutivo de las acciones ordinarias
que la Constitución y la ley asignan a las distintas jurisdicciones, según su especialidad, para la
protección de los derechos que se consideran vulnerados, sino más bien, puede únicamente
instaurarse cuando el lesionado no tiene otro medio de defensa, por lo que cuando hubiesen
otros recursos a su alcance, los mismos deben ser utilizados primero y sólo se concederá la tutela
de dicha acción constitucional cuando aquellos resulten ineficaces para la defensa de los
derechos, o cuando se lo otorgue como protección inmediata para evitar un daño irreparable.

III.2.Ambito de protección de la acción de amparo constitucional y el recurso directo de


nulidad

El art. 122 de la CPE, establece: "Son nulos los actos de las personas que usurpen funciones que
no les competen, así como los actos de las que ejercen jurisdicción o potestad que no emane de
la ley".

Al respecto, el Tribunal Constitucional a partir del entendimiento desarrollado en la SC


0099/2010-R de 10 de mayo, a través de la cual se moduló los alcances de protección señalados
en la SC 0585/2005-R de 31 de mayo, ante la vulneración al juez natural en su elemento
competencia, fijando ámbitos de protección distintos de la acción de amparo constitucional y del
recurso directo de nulidad, dejó establecido que para el control de constitucionalidad
vinculado directamente a la competencia, concretamente la garantía inserta en el art 122
de la CPE, está previsto el recurso directo de nulidad, señalando: "En la esfera jurisdiccional
y en concordancia con el art. 79.II de la LTC, existen también tres supuestos claros que forman
el 'núcleo esencial' de esta garantía, siendo por tanto nulas las decisiones emitidas por
autoridades judiciales en los siguientes supuestos: i) Resoluciones emitidas en ejercicio de
jurisdicción o potestad que no emane de la Ley; ii) Las resoluciones o actos pronunciados por
autoridad que usurpe funciones que no le compete; iii) Resoluciones pronunciadas por
autoridad jurisdiccional que hubiere cesado en sus funciones.

En mérito a lo señalado, se puede determinar que el antes recurso de amparo constitucional,


ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección eficaz y pertinente para el resguardo
del derecho al debido proceso en todos sus elementos incluido el juez natural, pero, solamente
en sus elementos imparcialidad e independencia, en ese sentido, debe precisarse que la
protección del tercer componente del juez natural; el referente a la competencia en cuanto a
los supuestos de hecho antes descritos; es decir, usurpación de funciones que no estén
mencionadas por ley, ejercicio de potestad administrativa que no emane de la ley,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 788
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

resoluciones judiciales emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley o


pronunciadas por autoridad jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus funciones o que
hubieren cesado en las mismas; se encuentran resguardados específicamente por el recurso
directo de nulidad" (las negrillas son nuestras).

III.3. Análisis del caso concreto

De los antecedentes que informan el proceso, se constata que dentro la demanda de interdicto de
adquirir la posesión solicitada por Mercedes, Juana, Gladis y Humberto Vargas Román, respecto
a un lote de terreno sito en la localidad Huarapuma de la jurisdicción de Sipe Sipe, provincia
Quillacollo del departamento de Cochabamba, el ahora accionante, mediante memorial de 16 de
junio de 2006, se apersonó y suscitó oposición a la demanda planteada, mismo que fue
rechazado y declarada probada la demanda mediante Sentencia de 20 de marzo de 2007, ante lo
cual planteó recurso de apelación, solicitando la nulidad por falta de competencia en razón
de materia, toda vez que los conflictos emergentes de la posesión de derecho propietario en
materia agraria, se encuentran sometidos a la jurisdicción agraria en virtud del principio de
especialidad; sin embargo, el Juez Primero de Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo,
mediante Auto de Vista de 28 de marzo de 2008, consideró que al haber suscitado oposición a
la demanda en lugar de plantear excepción de incompetencia por razón de materia, habría
aceptado la competencia de los tribunales ordinarios.

Ahora bien, del petitorio de la presente acción constitucional se tiene que el accionante solicita
se declare nulo e ilegal el Auto de Vista de 28 de marzo de 2008 y por consiguiente se disponga
que el Juez Primero de Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo, dicte nueva resolución,
puesto que el 23 de marzo de 2007, interpuso el recurso de apelación respecto a la Sentencia
emitida el 20 del citado mes y año, solicitando su nulidad por falta de competencia en razón de
materia, toda vez que la propiedad objeto del litigio se encontraba fuera del radio urbano,
debiendo ser sometidos a la jurisdicción agraria, aspecto que denota que la problemática jurídica
planteada por el accionante mediante esta acción de defensa es justamente que este Tribunal
ingrese a analizar la competencia dentro del cual se desarrollo dicho proceso, pretensión que no
puede dilucidarse mediante la acción que nos ocupa, no constituyendo un mecanismo idóneo
para revertir el supuesto acto ilegal denunciado, siendo aspectos que deben ser resguardados
por el recurso directo de nulidad, conforme a la jurisprudencia citada en el Fundamento
Jurídico III.2 de este fallo.

Consiguientemente, el Juez de garantías, al declarar "improcedente" la acción de amparo


constitucional que se revisa, aunque con otros fundamentos y otra terminología, ha evaluado en
forma correcta los datos del proceso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional a través de su Sala Liquidadora transitoria, en virtud a


lo previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre; en revisión, resuelve: APROBAR,
la Resolución de 26 de agosto de 2009, cursante de fs. 260 a 263, dictada por el Juez Segundo de
Partido en lo Civil y Comercial de Quillacollo del Distrito Judicial de Cochabamba, constituido
en Juez de garantías, y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 789


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Sandoval landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0065/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20291-41-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución 25 de 14 de agosto de 2009, cursante de fs. 151 a 152 y vta.,


pronunciada, dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Wilmar Guery
Zurita Mercado contra Rimer Ángel Céspedes Hinojosa, Autoridad Sumariante del
Gobierno Municipal de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memoriales presentados el 17 y 22 de julio de 2009, cursantes de fs. 50 a 54 y vta.; y


57 y vta., el accionante alega lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En su condición de Jefe del Departamento II de Transporte, Maquinaria y Maestranza del


Gobierno Municipal de Cochabamba, fue procesado administrativamente por Rimer Ángel
Céspedes Hinojosa, Autoridad Sumariante de la referida entidad, designada el 1 de junio de
2009, quien emitió el Auto Inicial de Proceso Administrativo el 22 del mismo mes y año, en el
que se le atribuye una supuesta infracción del Reglamento Interno de Personal, previsto en el art.
88, incs. b), c), g) e i), sin especificar concretamente la denuncia, dando lugar a la ampliación
del plazo probatorio por diez días adicionales.

Indica que, el Sumariante fue designado extemporáneamente, razón por la cual no era el Juez
natural para su procesamiento, vulnerándose la abundante jurisprudencia constitucional existente
al respecto, con el agravante que los hechos que supuestamente constituyen violatorios de la
normativa edil, ocurrieron en vigencia de la anterior Constitución Política del Estado, razón por
la cuál no se puede invocar la actual Constitución Política del Estado.

Expresa por otro lado que "lo grave del caso y que motivan que tenga que plantear este recurso
extraordinario de amparo constitucional, es que vengo siendo sometido a una autoridad no
competente, es decir no vengo siendo juzgado por el juez natural ya que esta autoridad
sumariante ha sido designado fuera de la normativa legal vigente aplicable al sector público"
(sic).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 790


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante considera lesionados sus derechos a la seguridad jurídica y al debido proceso en su


elemento del juez natural, citando al efecto los arts. 120 y 178 de la Constitución Política del
Estado (CPE) y 8 del Pacto de San José de Costa Rica y 14 del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos.

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita se le otorgue la tutela y declare "procedente" con expresa condenación de


costas procesales y se disponga la nulidad del proceso administrativo interno "entre tanto no se
le someta al juez natural" (sic).

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública, el 14 de agosto de 2009, cuya acta cursa a fs. 150 y vta., se
produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante, en audiencia ratificó íntegramente la acción planteada.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El demandado, presentó informe escrito, cursante de fs. 141 a 145, expresando lo siguiente: a)
El proceso administrativo fue sustanciado en cumplimiento de la normativa administrativa
aplicable al caso, dentro del cual el accionante tuvo la oportunidad de asumir defensa irrestricta
a través de todos los memoriales presentados, llegando a concluir con la sanción que se le
impuso en virtud de que ya fue destituido en un anterior y diferente proceso administrativo; y, b)
En lo referido a la supuesta falta de competencia del sumariante por no haber sido designado de
acuerdo a lo dispuesto al Decreto Supremo (DS) 23318-A de 3 de noviembre de 1992, éste
extremo es inaceptable en razón a que la Ley de Procedimiento Administrativo, dispone que la
sustitución de autoridades por otras competentes, es posible en ciertos casos, como se dio en
autos; ya que el sumariante inicialmente designado renunció a su cargo, dejando por tanto sus
funciones, hecho que dio lugar a que el accionante confunda el órgano jurisdiccional
administrativo con la persona propiamente dicha.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El Gobierno Municipal de Cochabamba a través de su representante, como tercero interesado, en


audiencia expresó que la designación del Juez Sumariante, fue efectuada con todo el respaldo
legal de orden administrativo que sustenta dicha decisión y que se halla inmersa en la Ley de
Municipalidades.

I.2.4. Resolución

La Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Cochabamba, constituida en Tribunal de garantías, mediante Resolución 25 de 14
de agosto de 2009, cursante de fs. 151 a 152 y vta., denegó la tutela, en base a los siguientes
fundamentos: 1) El accionante, durante la sustanciación del proceso administrativo seguido en
su contra, debió interponer la excepción de incompetencia; y, 2) El recurso jerárquico planteado
por el accionante, fue efectuado sin la previa interposición del recurso de revocatoria, con el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 791
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

añadido que el citado recurso, fue interpuesto erróneamente contra una providencia de 25 de
junio de 2009 que fue dejada sin efecto.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis del expediente y de la prueba aportada, se concluye lo siguiente:

II.1. Mediante el memorando 0704 de 1 de junio de 2009, Rimer Ángel Céspedez Hinojosa fue
designado como Autoridad Sumariante del Gobierno Municipal de Cochabamba (fs. 2).

II.2. A través del Auto inicial de proceso administrativo 002/09 de 22 de junio de 2009, se inició
el proceso administrativo interno contra Wilmar Guery Zurita Mercado, por probable infracción
e incumplimiento del art. 88 incs. b), c), g) e i) del Reglamento Interno de Personal (fs. 3).
II.3. Por memorial de 24 de junio de 2009, el accionante solicitó fotocopias legalizadas del
memorando de designación del demandado, cuestionando su competencia como Autoridad
Sumariante del Gobierno Municipal de Cochabamba (fs. 10).

II.4. Mediante memorial de 29 de junio de 2009, el accionante planteó recurso de revocatoria


contra la providencia de 25 del mes y año citado, (fs. 12 y vta.) por la cual se rechazó la
pretensión efectuada en el memorial de 24 del mismo mes y año (fs. 12).

II.5. El Auto de 1 de julio de 2009, fue emitido por la Autoridad Sumariante, Rimer Ángel
Céspedez Hinojosa, dando respuesta al recurso de revocatoria planteado por el accionante, abrió
nuevo periodo de prueba y se dejo sin efecto el proveído de 25 de junio de 2009 (fs. 13); y, el
mismo día Wilmar Guery Zurita Mercado, interpuso recurso jerárquico contra el proveído de 25
de junio del mismo año, por el cual fue rechazado el recurso de revocatoria planteado contra la
negativa de la otorgación de fotocopias legalizadas (fs. 14 y vta.), el mismo que es rechazado
mediante proveído de 3 de julio de 2009 (fs. 16).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la "seguridad jurídica" y al debido proceso


en su elemento al juez natural; por cuanto, en su condición de funcionario del Gobierno
Municipal de Cochabamba, fue procesado administrativamente por el demandado; quien fue
designado extemporáneamente, razón por la cual no era el Juez natural para su procesamiento,
careciendo de competencia para asumir las funciones de sumariante. En consecuencia,
corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a los fines de conceder o
denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

De acuerdo a lo previsto en el art. 128 de la CPE, la acción de amparo constitucional, ha sido


instituida como una acción de defensa que otorga protección contra los actos u omisiones
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 792
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que


restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías fundamentales de
la persona reconocidos por la Constitución y la ley; consecuentemente mediante esta acción
tutelar, es posible conocer y resolver la denuncia de actos u omisiones ilegales de servidores
públicos.

III.2. La acción de amparo constitucional, no define falta o pérdida de


competencia prevista por el art. 122 de la CPE, por existir para ello el recurso directo de
nulidad

En el caso de autos es de aplicación el razonamiento establecido en la SC 0099/2010-R de 10 de


mayo, que estableció lo siguiente: "En mérito a lo señalado, se puede determinar que el antes
recurso de amparo constitucional, ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección
eficaz y pertinente para el resguardo del derecho al debido proceso en todos sus elementos
incluido el juez natural, pero, solamente en sus elementos imparcialidad e independencia, en
ese sentido, debe precisarse que la protección del tercer componente del juez natural; el
referente a la competencia en cuanto a los supuestos de hecho antes descritos; es decir,
usurpación de funciones que no estén mencionadas por ley, ejercicio de potestad administrativa
que no emane de la ley, resoluciones judiciales emitidas en ejercicio de jurisdicción que no
emane de la ley o pronunciadas por autoridad jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus
funciones o que hubieren cesado en las mismas; se encuentran resguardados específicamente
por el recurso directo de nulidad. (...) III.7. Modulación de la línea jurisprudencial emanada del
Tribunal Constitucional (...) Del contenido del entendimiento precedentemente mencionado, se
tiene que el amparo constitucional podría ser activado por vulneración al juez natural en su
elemento competencia; al respecto, es pertinente modular este punto de la SC 0585/2005-R,
bajo el siguiente criterio: de acuerdo a las reglas del principio de interpretación de unidad
constitucional, dentro del ordenamiento jurídico-constitucional boliviano, el juez natural en su
elemento competencia, para todos los supuestos descritos en los arts. 31 de la CPEabrg y 122
de la CPE, tiene un mecanismo idóneo, inmediato, eficaz y específico para su protección, que es
precisamente el recurso directo de nulidad, constituyendo el amparo constitucional un medio
eficaz para reparar lesiones al debido proceso, también en lo referente al juez natural, pero
solo en sus elementos de imparcialidad e independencia. En el marco de lo establecido, debe
aclararse que de no asumirse esta postura, se estaría desconociendo la verdadera naturaleza
jurídica del recurso directo de nulidad y se crearía confusión en las vías pertinentes para
defender la garantía inserta en los arts. 31 de la CPEabrg y 122 de la CPE" (las negrillas y el
subrayado nos corresponden).

Prosigue la referida Sentencia Constitucional al señalar que: "…el constituyente fue sabio al
determinar un mecanismo inmediato e idóneo para proteger efectivamente actos que puedan ser
nulos, pudiendo incluso suspenderse los efectos de los mismos para evitar 'nulidades
consecuentes' que en un Estado Social y Democrático de Derecho serían completamente
adversas y contrarias al interés público; por esta razón y por la importancia del resguardo a la
competencia, se establece un mecanismo reforzado y específico para protegerla frente a los
supuestos de hecho antes descritos.

En mérito a todos los aspectos señalados y específicamente en el campo de los actos


administrativos municipales, se colige que el accionante constitucional no es la vía idónea
para restituir supuestos de hecho descritos en los art. 31 de la CPEabrg y 122 de la CPE, toda
vez que existe un mecanismo específico para su resguardo cual es el recurso directo de
nulidad, por tanto, pretender hacer valer presuntas vulneraciones a los supuestos de hecho
descritos en estas garantías mediante el antes recurso de amparo constitucional, ahora acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 793


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de amparo, lo hace manifiestamente improcedente, por cuanto se desvirtúa y desnaturaliza la


actuación del juez natural" (las negrillas nos pertenecen).

Por lo que el debido proceso, reconocido constitucionalmente como un derecho y garantía


jurisdiccional al amparo de los arts. 115.II y 117.I de la CPE, encuentra protección en si mismo
a través que la tutela a sus diferentes elementos -entre ellos, al juez competente, independiente e
imparcial- mediante los recursos extraordinarios y específicos destinados para el efecto,
correspondiendo su análisis y protección mediante la acción de amparo constitucional, cuando se
invoca la protección del juez independiente e imparcial; y, por el recurso directo de nulidad,
tratándose del juez competente.

III.3. Análisis del caso concreto

De acuerdo a los fundamentos expuestos por el accionante en la presente acción de amparo


constitucional, éste considera vulnerados los derechos a la "seguridad jurídica" y al debido
proceso en su "elemento al juez natural"; toda vez, que fue procesado administrativamente por el
demandado al ser autoridad sumariante; empero, este funcionario fue designado de manera
extemporánea, por lo que no tenía competencia para procesarlo.

En consecuencia, se establece que la denuncia efectuada por Wilmar Guery Zurita Mercado, gira
en torno a la supuesta falta de competencia de Rimer Ángel Céspedez Hinojosa, toda vez que la
designación del mismo como Tribunal Sumariante, fue de manera extemporánea, es decir, el 1
de junio de 2009 y no como manda el art. 12 del DS 23318-A, la primera semana hábil del año,
y esta supuesta ilegalidad, vincula al juez natural; por lo que es de aplicación la jurisprudencia
precedentemente citada, toda vez que la lesión del juez natural en su elemento competencia que
ahora impugna el accionante, debió haberse impugnado a través del recurso directo de nulidad y
no así mediante la acción de amparo constitucional, al ser el medio idóneo para conocer y
resolver los actos de las personas que usurpen funciones que no les competen, así como los actos
de las que ejercen jurisdicción y o potestad que no emane de la ley, razón por la cual no se puede
ingresar a analizar el fondo de la presente acción.
En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber denegado con otro fundamento, ha actuado
correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 25 de 14 de agosto de 2009, cursante de fs. 151 a 152 vta.,
pronunciada por la Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Cochabamba y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi .-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza morales.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 794


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0067/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20048-41-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 204/09 de 29 de junio de 2009, cursante de fs. 384 a 389 y vta.,
pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Franz Mario Reyes
Cabrera en representación de María Yamile Hayes Michel, Mirtha Janeth Loayza Viera, Juan
Pablo Ayala, Hugo Canllagua Cataño, Martha Ollisco Caballero, Alex Jadue Calvo, Willy
Antezana Silva, Weimar Durán Quiroga, Nadia Rossío Echarla Franco, Marina Durán
Salgueiro, Laura Jimena Torres Salvador, Evelyn Fátima Rejas Heredia, Janeth Marañon
Menduiña de Mendoza, María Alejandra Navarro Verdecio, Ana María Morales Nuñez de
Taboada, Jaime Daniel Mena Soruco, Roberto Arturo Corrales Dorado, Nelson Rodrigo
Miranda Vargas, María Esther Deuer Deuer, Sdenka Rocío Vega Mendoza, Rosa Mercedes
Cortes Michel, Zulema Antonieta Gonzales Coronado de Morales, Tania Elena Claure Rojas,
Hugo Armando Taboada Jiménez, Cecilia Mariel Beltrán Romay, Alex Gustavo Rengel Patzi,
Claudia Marcela Amusquivar Gutiérrez, Raúl Jonny Camacho Aparicio, Amanda Giovanna
Pereira Poppe y Roberto René Oscar Rivera Cors contra Eddy Walter Fernández Gutiérrez,
Presidente de la Corte Suprema de Justicia -ahora Tribunal Supremo de Justicia- y del
Consejo de la Judicatura- ahora Consejo de la Magistratura-, Rodolfo Mérida Rendón,
Consejero de la Judicatura-ahora Consejero de la Magistratura-; y, Silvia Salame Farjat,
Magistrada Responsable del Tribunal Constitucional, -ahora Tribunal Constitucional
Plurinacional-.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 22 de junio de 2009, cursante de fs. 179 a 191 y vta., la parte
accionante expresa lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Que mediante Resolución Administrativa (RA) 140/2009 de 23 de abril, el Presidente de la


Corte Suprema y del Consejo de la Judicatura y el Consejero de la Judicatura, ahora
demandados, resolvieron "Asignar al Tribunal Constitucional, de hasta el 15% del presupuesto
de servicios personales y un ajuste en el de gastos de funcionamiento a partir del mes de mayo
de 2009" (sic); dicha RA 140/2009, fue emitida sin una debida fundamentación y sin el quórum
legal en el Plenario del Consejo de la Judicatura, toda vez que el Consejero Rodolfo Mérida
Rendón, no puede adoptar él solo, decisión alguna y tampoco podía ni puede hacer con la
concurrencia del Presidente; asimismo, dicha Resolución es ilegal porque se trata de un acto
administrativo ejecutado como vía de hecho administrativo, la que supone el prescindir de vías
legales para poder establecer e imponer un estado de cosas; posteriormente, a través de la
circular de 4 de mayo de 2009, la Magistrada Responsable del mencionado Tribunal
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 795
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Constitucional, hizo conocer la referida Resolución, a los representados, como personal de la


institución "a efectos de que asuman las medidas que consideren convenientes" (sic).

Indica que, por nota de 5 de mayo de 2009, todo el personal del Tribunal Constitucional
representó la citada circular, en el entendido que inicialmente, correspondía a la Magistrada
Responsable, adoptar las determinaciones y/o acciones que el caso aconseje y les dé a conocer
su decisión; en respuesta, a través de la nota de 6 del mismo mes y año, aseveró que cumplió con
su deber de poner en conocimiento de todo el personal de la institución, la RA 140/2009, que
afecta sus intereses; de los funcionarios que prestan sus servicios en ese Tribunal; ante esta
situación nuevamente los mandantes manifestaron a la Magistrada Responsable, que de inicio
correspondía a esa autoridad, asumir alguna acción para impugnar la referida Resolución.

Agrega que por nota TC-PRES 231/09 de 7 de mayo de 2009, la Magistrada, les hizo conocer la
nota de 6 del mismo mes y año, mediante la cual dicha autoridad manifestó al Presidente de la
Corte Suprema y del Consejo de la Judicatura, que del estudio de la RA 140/09, se deduce que
las decisiones allí asumidas, no surgen de un análisis de la situación institucional del Tribunal y
que no tiene fundamentos legales, ni técnico administrativos que les obliguen a cumplir tales
determinaciones; ante esta situación, los funcionarios del Tribunal Constitucional, plantearon
recurso de revocatoria contra la citada Resolución Administrativa, pidiendo a los demandados,
revoquen el Fallo impugnado, la dejen nula y sin efecto ni valor legal alguno; sin embargo, el
Secretario General a.i. del Plenario del Consejo de la Judicatura, mediante nota de 10 del
referido mes y año, les hizo conocer que no tenían legitimación activa, para interponer el recurso
de revocatoria, cuando la rebaja del presupuesto de servicios personales del Tribunal
Constitucional afecta directamente a los funcionarios.

Manifiesta además, que por nota de 21 de mayo de 2009, el Gerente de Recursos Humanos del
Consejo de la Judicatura a.i., devolvió a la Directora Administrativa y Financiera del Tribunal
Constitucional, la planilla de haberes y de alcance de nivel correspondiente al mes de mayo, a
efectos de que se adecue a lo establecido en la RA 140/2009, reiterándose a partir de ese
momento varias notas tanto de parte del Tribunal Constitucional, que insistió en el
procesamiento de dichas planillas, como del Consejo de la Judicatura, que las devolvía pidiendo
se adecuen a la citada Resolución.

Alega que el 25 de mayo de 2009, sus mandantes tomaron conocimiento que la Magistrada
Responsable del Tribunal Constitucional, presentó renuncia irrevocable a su cargo, a hacerse
efectiva en el término de un mes a partir de esa fecha; ante esa situación en forma coherente al
rechazo a la ilegal RA 140/2009, remitieron carta suscrita por todos los funcionarios al Consejo
de la Judicatura, solicitando que con sus mismos ítems consignados en el presupuesto del
Tribunal, se les pueda reasignar funciones en otros entes del Poder Judicial, en forma temporal,
hasta que se designen las nuevas autoridades de la institución; asimismo, a través de la circular
de 1 de junio de 2009, la mencionada Magistrada, hizo conocer a todo el personal del Tribunal
Constitucional a efectos de que asuman las medidas que consideren pertinentes, y que las
planillas de haberes y alcances de nivel correspondiente a mayo, fueron remitidas al Consejo de
la Judicatura en tiempo oportuno, que fueron devueltas por funcionarios sin competencia; en
respuesta, los funcionarios señalaron que en principio le correspondía a dicha autoridad efectuar
las gestiones necesarias para lograr el cumplimiento del pago de sus haberes; el mismo día fue
respondida por la Magistrada, manifestando que ella cumplió con todas las obligaciones
emergentes del cargo; frente a esa respuesta, el personal dirigió la nota de 2 de junio de 2009, al
demandado Consejero de la Judicatura, expresando que todo el personal del Tribunal
Constitucional, estuvo prestando sus servicios con toda normalidad y cumplido las obligaciones
inherentes a cada cargo, lo que motiva el derecho a cobrar sus haberes; paralelamente el mismo
día, presentaron un memorial ante el Presidente de la Corte Suprema y al Consejero de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 796
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Judicatura, reiterando su solicitud formulada en el otrosí del recurso de revocatoria, para que se
deje en suspenso la RA 140/2009, al estar impugnada y el recurso pendiente de resolución,
además que reiteró la legitimación del ordenamiento jurídico les reconoce como personas
afectadas directamente con esa decisión.

Asimismo, el 12 de junio de 2009, feneció el plazo para emitir resolución final en el recurso de
revocatoria, sin que se haya pronunciado resolución alguna, produciéndose así el silencio
administrativo negativo y por nota de 15 del mismo mes y año, solicitaron nuevamente a la
Magistrada Responsable, el pago de los sueldos de mayo, quien les respondió por nota de 16 de
ese mes y año, que no era atribuible a su autoridad, la falta de cancelación de los sueldos de
mayo, puesto que las planillas de haberes fueron enviadas ante la instancia administrativa de
manera oportuna; sin embargo, el Consejo de la Judicatura las rechazó.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante considera lesionados los derechos de sus representados al trabajo, a ejercer la


función pública para la cual el Tribunal Constitucional les ha contratado, a la estabilidad en el
empleo y a una remuneración justa, citando al efecto los arts. 15.V y 46 de la Constitución
Política del Estado (CPE) y 23 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela contra: a) Las autoridades demandadas del Consejo de la Judicatura,
declarando la nulidad de la RA 140/2009 y disponiendo que dichas autoridades ordenen a las
instancias correspondientes, la aprobación de las planillas de haberes para viabilizar el pago de
los sueldos del mes de mayo y del tiempo de trabajo, que sus representados continúen
desarrollando posteriormente y, contra la Magistrada Responsable del Tribunal Constitucional
para que operativice el pago de sus sueldos por las instancias correspondientes de la institución;
b) Disponga en forma clara y expresa el pago de sus haberes, tanto de mayo pasado, así como de
todo el tiempo posterior que sus mandantes continúen trabajando; c) Se disponga el respeto y
resguardo de las fuentes de trabajo de todos los funcionarios y funcionaras del Tribunal
Constitucional precautelando su estabilidad laboral; y, d) Ordene el pago de costas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 27 de junio de 2009, según consta en el acta cursante de fs.
370 a 383 y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

La representante Yamile Hayes Michel, amplió la acción con el siguiente fundamento: 1) El


Tribunal Constitucional tiene más de diez años de funcionamiento, al que accedieron previo
concurso de méritos y que se mantenían con una evaluación semestral, estando por tanto
institucionalizados el 95% de su personal, los que no podían ser destituidos sino por las causales
prevista por ley; 2) La Resolución 140/2009, los estaba condicionando a un virtual despido, que
afecta a sus derechos y la de sus familias de manera general, sin tomar en cuenta la existencia de
mujeres en estado de gravidez en la institución.

En la réplica la accionante, Yamile Hayes Michel, aclaró que a la fecha ya no estaba


considerado por la actual Constitución Política del Estado, el proceso contencioso administrativo
y tampoco procedía el recurso de inconstitucionalidad; finalmente, indicó que el proceso de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 797


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

aprobación del presupuesto del Tribunal Constitucional, ya fue aprobado y no podía ser reducido
a un 15% por una Resolución Administrativa.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Silvia Salame Farjat, presentó informe de fs. 251 a 253 y vta., expresando lo siguiente: i)
Cumplió con su obligación de remitir las planillas de pago al personal del Tribunal
Constitucional por los meses de mayo y junio de 2009, al Consejo de la Judicatura, tal y como
aceptan los accionantes; sin embargo, mediante nota de 20 de mayo de 2009, el Director de
Carrera y Escalafón Judicial del Consejo de la Judicatura, procedió a la devolución de las
planillas de haberes del mes de mayo, argumentado que deberían ser adecuadas a lo establecido
por la RA 140/2009 y que a partir de ello el Consejo de la Judicatura, se constituye en el único
responsable de la falta de pago de sueldos a los funcionarios del Tribunal Constitucional; no
obstante ello, insistió reenviando una y otra vez dichas planillas, recibiendo la misma respuesta
negativa; ii) El Consejo de la Judicatura, justifica sus actos en la RA 140/2009 que es totalmente
ilegal, por no cumplir con los requisitos de forma y contenido de ese acto administrativo, la falta
de competencia de las dos personas que la firmaron y más aún existiendo expresas normas
legales como el art. 26 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC), que determina su
autonomía en la ejecución y administración presupuestaria; iii) La RA 140/2009, en ningún caso
puede ser aplicada cuando existen normas legales en plena vigencia, una de ellas es el
presupuesto del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional que tiene categoría de ley; en ese
entendido al existir la Ley del Presupuesto General de la Nación, que asigna al Tribunal
Constitucional un presupuesto, estaba obligada a su acatamiento y ejecución, no obstante que
una resolución pretendiera reducir ese presupuesto al 15%, debió tramitarse una ley que
modifique el presupuesto, caso contrario estaba su persona y los codemandados en la obligación
de dar cumplimiento a la ley y no de la RA 140/2009; iv) Respecto a su segunda obligación para
efectivizar el pago de sueldos, era la de firmar el cheque que posibilite la transferencia de los
fondos a sus cuentas individuales, explicó que al no haberse devuelto las planillas, el Consejo de
la Judicatura rechazó el pago de las mismas, y por tanto no efectuó el desembolso de recursos
económicos, de acuerdo a la certificación emitida por el Banco Unión, en tales circunstancias y
sin la existencia de fondos en sus cuentas, no podía firmar el cheque de pago de sueldos a los
funcionarios; y, v) Finalizó indicando que en un nuevo acto ilegal el Consejo de la Judicatura,
negó la recepción de las planillas de pago de sueldos del mes de junio que fueron remitidas el 25
de junio.

Los representantes del Consejero Rodolfo Mérida Rendón, presentaron informe de fs. 256 a 279,
expresaron, lo siguiente: a) Los mandantes en la demanda reiteran que se está impugnando la
RA 140/2009; sin embargo, la vía elegida no es el amparo constitucional, sino lo que se persigue
es anular una resolución, que a criterio de los representado del accionante es regla, porque atenta
al art. 46 de la CPE, entonces lo que corresponde es accionar la inconstitucionalidad de esa
resolución judicial, para que en estricto apego a lo que manda el art. 133 de la Ley Fundamental
esa resolución impugnada sea inaplicable; b) Los representantes alegan, que para restablecer sus
derechos iniciaron sus reclamos, planteando el recurso de revocatoria, sin haber recurrido al
recurso jerárquico como correspondía, por lo que no agotaron la vía administrativa; por otra
parte, en el supuesto no consentido de que se entendiera que son las mismas autoridades las que
deberían resolver el recurso jerárquico o que la instancia llamada a resolver este efecto, no
estuviera vigente temporalmente, quedaba la vía del procedimiento administrativo que eligieron
anticipadamente los accionantes, que establece la Ley de Procedimiento Administrativo, que es
el proceso contencioso administrativo; c) En cuanto a la propuesta que el Consejero demandado,
les reasignara funciones en otros órganos del poder judicial, se debe señalar que es una
propuesta que induce a cometer ilegalidades puesto que el referido Consejero, inclusive ya ha
sufrido denuncia penal por supuestas designaciones ilegales en la Corte Superior por casos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 798
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

similares; d) El Consejo de la Judicatura, no puede pagar haberes a quienes no contrató, por


cuanto se demostró que no existe presupuesto, asimismo se debe entender que las tareas de los
funcionarios del Tribunal, son consecuencia y de apoyo, a las funciones que desarrollan los
Magistrados del Tribunal, es decir que ellos existen laboralmente en tanto y cuanto existan
magistrados en funciones, lo que no acontece en la actualidad; e) La Resolución que se impugna
es administrativa y no requiere de la mayoría de votos como sostienen los representados y las
resoluciones a que hacen referencia la Ley del Consejo de la Judicatura, se refieren a las
resoluciones que como Tribunal de segunda instancia pronuncia el Pleno del Consejo de la
judicatura en procesos disciplinarios; y, f) El principal reclamo de los representados del
accionante, se funda en la supuesta vulneración al derecho al trabajo, previsto en el art. 46 de la
CPE, toda vez que el Consejo de la Judicatura, en ningún momento procedió a la contratación y
menos despido de ninguno de los funcionarios del Tribunal Constitucional, sino que es ese
Tribunal, como ellos lo sostienen y afirman procedieron a su contratación.

En la dúplica, uno de los representantes del Consejero de la Judicatura, alegó que se tomó la
decisión de emitir la RA 140/2009, para evitar el gasto innecesario en resguardo del patrimonio
del Estado, por eso se asignó el 15% para evitar responsabilidades posteriores, pues no se puede
dar recursos a un órgano que no cumple funciones, hacerlo implicaría egresos y estos implican
responsabilidades, deslindando si acaso se incurre en estos hechos.

Asimismo la demandada, Silvia Salame Farjat, alegó en audiencia que reclamó en varias
ocasiones, ante el Ministerio de Hacienda, en donde se le informó que el presupuesto de una
entidad es responsabilidad de la Máxima Autoridad Ejecutiva (MAE), en consecuencia, al ser
ella la Magistrada Responsable del Tribunal, tenía esa responsabilidad y que en base a esa
información, acudió a reuniones con el Consejo de la Judicatura, donde les explicó todo aquello
que le fuera informado en el Ministerio de Hacienda y que un presupuesto que ya estaba
aprobado no podía ser modificada por nadie y que la RA 140/2009, no nació al mundo del
derecho, y que por eso no la impugnó; porque hacerlo sería validarla.

El demandado Eddy Fernández, pese a su legal notificación no presentó informe, ni se presentó


en audiencia (fs. 205 vta.).

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Chuquisaca, constituida en Tribunal de garantías, mediante Resolución 204/09 de
29 de junio, cursante de fs. 384 a 389 y vta., concedió en parte la tutela solicitada, solo en
relación a los demandados y en relación a los derechos al salario, al trabajo y al ejercicio de la
función pública y deniega la tutela en relación a la estabilidad laboral y a la codemandada, Silvia
Salame Farjat y en consecuencia dispone: 1) Dejar sin efecto la RA 140/2009; 2) Rodolfo
Mérida Rendón, Consejero de la Judicatura, ordene de inmediato a las instancias
correspondientes del Consejo de la Judicatura, procedan a la tramitación y aprobación de las dos
planillas pendientes de pago de salarios de los funcionarios del Tribunal, para que la Dirección
Administrativa de dicho órgano proceda a la emisión de cheque y pago efectivo de salarios a los
funcionarios de dicha entidad; con el siguiente fundamento: i) La RA 140/2009, emitida por las
autoridades demandadas, es ilegal, pues no existe norma legal alguna que permita a dichas
autoridades, disponer modificaciones presupuestarias en relación al presupuesto del Tribunal
Constitucional, estando inscrito en el Presupuesto General de la Nación, como parte del
presupuesto del Poder Judicial y aprobado mediante Ley Financial, que no puede ser modificada
por ninguna instancia administrativa; ii) De acuerdo a la Ley del Consejo de la Judicatura y la
Ley del Tribunal Constitucional, el Tribunal tiene la atribución de programar y ejecutar su
Programa Operativo Anual (POA), en coordinación con el Consejo de la Judicatura, no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 799
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

existiendo norma alguna que permita al Consejo ajustar o reajustar el presupuesto de la entidad
desconcentrada de manera unilateral; iii) No existe motivación en cuanto al por qué del 15% y
no otro porcentaje; iv) Las autoridades demandadas, emitieron la Resolución impugnada, sin el
quórum suficiente; v) El no pago de salarios a los accionantes, es un efecto de la Resolución
impugnada, siendo por ello, la que ocasiona la vulneración al derecho fundamental a percibir
salarios, no sólo de los representados sino de todo el personal del Tribunal Constitucional, que
cumplió con normalidad sus funciones; vi) En cuanto al resguardo de las fuentes de trabajo,
vinculado al derecho a la estabilidad laboral que reclaman los accionantes, consideran que no
solo esa institución sino en cualquier entidad está reatado a realidades propias y específicas de
dichas entidades y en base a las cuales las autoridades competentes en el marco de sus
atribuciones y dentro del marco de la ley deberán asumir las decisiones que correspondan, por lo
que no incumbe otorgar la tutela al derecho de estabilidad; vii) Con referencia a la demandada
Silvia Salame, se evidencia que para el pago de sueldos de los funcionarios del Tribunal
Constitucional, ha realizado todos los actos necesarios hasta la remisión de planillas al Consejo
de la Judicatura y respecto a que la demandada, no agotó mecanismos para evitar la vulneración
de los derechos emergentes de la resolución impugnada, se tiene elementos probatorias que a la
recepción de la citada Resolución, dicha autoridad respondió de manera inmediata alegando su
ilegalidad y decisión de no acatamiento; y si bien formalmente no consta de su parte, acto formal
administrativo de impugnación, tal omisión no es consecuencia directa de la vulneración de los
derechos de sus representados, razón por la que este tribunal considera que tampoco corresponde
otorgar la tutela solicitada.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis del expediente y de la prueba aportada, se concluye lo siguiente:

II.1. A través de la RA 140/2009, emitida por el Presidente de la Corte Suprema de Justicia y


del Consejo de la Judicatura y el Consejero de la Judicatura, resolvieron asignar al Tribunal
Constitucional, de hasta el 15% del presupuesto de servicios personales y un ajuste en el de
gastos de funcionamiento, a partir del mes de mayo de 2009 y requirió a la Responsable del
Tribunal Constitucional la reformulación del Plan Operativo Anual 2009, alegando en sus
considerandos lo siguiente: a) De acuerdo a la Ley 1979 de 24 de mayo de 1999, en su art. 26, el
presupuesto del Tribunal Constitucional será aprobado en Sala Plena y homologado por el
Consejo de la Judicatura. Asimismo que a la fecha existe cese de funciones de nueve
magistrados quedando una Magistrada Suplente, por tanto no existe el quórum correspondiente
para hacer efectivo un trabajo regular y normal; b) En la actualidad el Tribunal Constitucional,
no ejerce a plenitud sus competencias y atribuciones previstas en la Constitución Política del
Estado y la ley; por lo que en esa institución debió ejecutarse ajustes administrativos y de
recursos humanos, por ausencia de Magistrados titulares y suplentes, aspecto que no permite
ejercer la atribución del control constitucional, de conformidad al art. 1.II de la LTC; c) Resulta
evidente que al participar del presupuesto institucional del Poder Judicial, el Tribunal
Constitucional recibió del Consejo de la Judicatura, los techos referenciales de dicha
participación, estableciendo su POA y presupuesto anual, previendo la designación de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 800
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

autoridades titulares y el ejercicio normal de sus actividades; d) El presupuesto para la gestión


2009 del Tribunal Constitucional no fue aprobado por su Sala Plena y que la incorporación al
presupuesto del Poder Judicial fue en el entendido de que el Congreso Nacional designaría a las
autoridades oportunamente, hecho que no ocurrió, por lo que se hace necesario tomar medidas
correctivas para precautelar los intereses del Estado; y, e) Se hizo conocer a la Magistrada
Responsable la necesidad de asumir medidas restrictivas en su gasto presupuestario, al no estar
cumpliendo el objetivo de su función, así sea por hechos no atribuibles a la propia entidad,
habiendo recibido como respuesta la negativa de tomar dichas acciones (fs. 3, 5 a 6).

II.2. Mediante circular de 4 de mayo de 2009, la Magistrada Responsable del Tribunal


Constitucional, hizo conocer a todo el personal del mencionado Tribunal, la RA 140/2009, "a
efectos de que asuman las medidas que consideren convenientes" (sic); al día siguiente, todo el
personal del Tribunal representaron la circular señalada, mediante nota dirigida a la Magistrada
Responsable, alegando que inicialmente le correspondía adoptar las determinaciones y/o
acciones que el caso aconseje y darles a conocer su decisión; en respuesta, la Magistrada
mediante oficio de 6 de ese mes y año, expresó que cumplió con su deber de poner en
conocimiento de todo el personal de la Institución, la RA 140/2009, que afecta directamente a
los intereses de los funcionarios que prestan sus servicios en ese Tribunal. (fs. 4 y 7 a 8 vta.).

II.3. Por nota de 7 de mayo de 2009, nuevamente los representados de la mandante manifestaron
a la Magistrada que le correspondía, asumir alguna acción para impugnar la referida Resolución,
por cuanto, la misma era gravosa a sus intereses y derechos; y, dado que ponía en inminente
riesgo sus puestos de trabajo y remuneraciones, el mismo día mediante oficio, les hizo conocer
la nota de 6 de mayo del mismo mes y año, mediante la cual dicha autoridad, manifestó al
Presidente de la Corte Suprema y del Consejo de la Judicatura, que del análisis de la RA 140/09,
se deduce que las decisiones allí asumidas, no surgen de un análisis de la situación institucional
del Tribunal Constitucional y que no tiene fundamentos legales, ni técnico administrativos que
les obliguen a cumplir tales determinaciones (fs. 10 a 13).

II.4. En 13 de mayo de 2009, los funcionarios del Tribunal Constitucional, presentaron


recurso de revocatoria ante el Presidente de la Corte Suprema de Justicia y del Consejo de
la Judicatura y el Consejero de la Judicatura, solicitando se revoque la RA 140/2009, y por
ende dejándola nula y sin efecto ni valor legal alguno; posteriormente en respuesta,
mediante nota de 19 de mayo de 2009, el Secretario General a.i. del Plenario del Consejo de la
Judicatura, rechazó el recurso de revocatoria, argumentando falta de legitimación de los
recurrentes (fs. 14 a 22.).

II.5. A través de la nota recibida el 21 de mayo de 2009, el Gerente de Recursos Humanos


del Consejo de la Judicatura a.i., devolvió a la Directora Administrativa y Financiera del
Tribunal Constitucional, la planilla de haberes del mes de mayo, a efectos de que se adecue a lo
establecido en la RA 140/2009; posteriormente se reiteró varios oficios tanto de parte del
Tribunal Constitucional que insistió en el procesamiento de dichas planillas, como del Consejo
de la Judicatura, que las devolvía pidiendo se adecue a la citada Resolución Administrativa (fs.
32 a 40).

II.6. A través del oficio de 29 de mayo de 2009, dirigido a Rodolfo Mérida Rendón, Consejero
de la Judicatura, los funcionarios del Tribunal Constitucional, expresaron que al ser de
conocimiento público la renuncia de la única Magistrada del Tribunal Constitucional, a hacerse
efectiva el 26 de junio de ese año, solicitaron que con sus mismos ítems consignados en el
presupuesto del Tribunal, se les pueda reasignar funciones en otros entes del Poder Judicial, en
forma temporal, hasta que se designen las nuevas autoridades de la institución (fs. 41 a 44).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 801


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.7. El 2 de junio de 2009, los funcionarios del Tribunal Constitucional, se dirigieron mediante
oficio al Consejero de la Judicatura, expresando que todo el personal de esa institución, estuvo
prestando sus servicios con toda normalidad y cumplido las obligaciones inherentes a cada
cargo, motivo por el cual corresponde sean pagados sus haberes (fs. 50 a 61); en la misma fecha
los citados funcionarios, presentaron un memorial ante el Presidente de la Corte Suprema y al
Consejero de la Judicatura, reiterando su solicitud que fue formulada en el recurso de
revocatoria, para que se deje en suspenso la RA 140/2009 y aclararon su legitimación (fs. 62 a
66).

II.8. Por nota de 15 de junio de 2009, los funcionarios del Tribunal Constitucional, solicitaron
nuevamente a la Magistrada Responsable, el pago de los sueldos de mayo, quien les respondió
por nota de 16 de ese mes y año, alegando que no era atribuible a su autoridad la falta de
cancelación de los sueldos de mayo, puesto que las planillas de haberes fueron enviadas ante la
instancia administrativa de manera oportuna; empero, el Consejo de la Judicatura las rechazó; de
igual forma fue rechazada la planilla de haberes del mes de junio, de acuerdo a la nota enviada el
23 del citado mes y año, enviada por la Directora Administrativa y Financiera del Tribunal
Constitucional a la Magistrada Responsable de la citada Institución (fs. 72 a 74 y 242).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La parte accionante alega la vulneración de los derechos de sus representados al trabajo, a


ejercer la función pública, a la estabilidad en el empleo y a una remuneración justa, toda vez
que: 1) Los demandados al emitir la RA 140/2009, condicionan a sus mandantes a un virtual
despido, toda vez que dicha Resolución, dispuso la reducción del personal del Tribunal
Constitucional, hasta el 15%, desde el mes de mayo; y al tener conocimiento de la citada
Resolución, impugnaron la misma ante las autoridades pertinentes; sin recibir respuesta;
asimismo no se les canceló el sueldo de mayo, por no haber dado cumplimiento a la resolución
impugnada; además que dicho fallo no se encuentra debidamente fundamentada y fue emitida
sin el quórum suficiente; y, 2) la demandada en su condición de Magistrada Responsable del
citado Tribunal, no realizo las gestiones para la cancelación de haberes de los funcionarios del
Tribunal. En consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a
los fines de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. En cuanto a la acción de inconstitucionalidad

Previamente a ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada, es preciso aclarar que


los representantes del Consejero de la Judicatura demandado, alegaron que los representados,
debieron presentar una acción de inconstitucionalidad y no así una acción de amparo
constitucional; en cuanto a este aspecto, es menester aclarar que el art. 132 de la CPE, describe
que la acción de inconstitucionalidad debe ser interpuesta por "Toda persona individual o
colectiva afectada por una norma jurídica contraria a la Constitución tendrá derecho a presentar
la Acción de Inconstitucionalidad"; sin embargo en el presente caso lo que se está impugnando
es una Resolución Administrativa que no es una norma jurídica contenida en un texto normativo
jurídico, o en algún código o disposición legal, por lo que no correspondía presentar una acción
de inconstitucionalidad.

III.2. En relación al agotamiento de los recursos de revocatoria y jerárquico previsto en la


Ley de Procedimiento Administrativo y el proceso contencioso administrativo

Otro aspecto que impugnaron los representantes de Rodolfo Mérida, fue que los representados
no habrían agotado los recursos previstos en la Ley de Procedimiento Administrativo, pues si
bien plantearon el recurso de revocatoria; pero no el recurso jerárquico como correspondía;
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 802
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

empero, quienes suscribieron la Resolución impugnada fue el Consejero de la Judicatura y el


que entonces ejercía las funciones de Presidente de la Corte Suprema y Consejo de la Judicatura,
máximas autoridades de esas dos entidades del Poder Judicial, por lo que era imposible plantear
el recurso jerárquico porque no existían otras autoridades superiores a las que emitieron la
referida Resolución.

Asimismo, en relación a que los representados, debieron interponer el proceso contencioso


administrativo, para agotar sus reclamos administrativos que se iniciaron con el recurso de
revocatoria, que plantearon impugnando la RA 140/2009, es preciso aclarar que el proceso
contencioso administrativo ya no existe en el nuevo contexto constitucional, por lo que no se
podía acudir a dicho recurso.

III.3. La acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, de acuerdo a lo previsto en el art. 128 de la CPE, ha sido


instituida como una acción de defensa que otorga protección contra los actos u omisiones
ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías fundamentales de
la persona reconocidos por la Constitución Política del Estado y la ley; en consecuencia, a través
de esta acción tutelar, es posible conocer y resolver la denuncia de actos u omisiones ilegales de
servidores públicos, que en el caso de autos sucede, toda vez que por una parte se denuncia actos
ilegales manifestados a través de la Resolución Administrativa emitida por los demandados y
por otra se denuncia la omisión indebida de la Magistrada Responsable del Tribunal
Constitucional codemandada; correspondiendo establecer si esas vulneraciones y amenazas a los
derechos de los representados, son o no evidentes.

III.4. La Resolución Administrativa 140/2009 de 23 de abril impugnada

En el caso de autos, se impugna la validez de la RA 140/2009, emitida por los demandados, por
lo que analizando la misma se evidencia lo siguiente: i) La Resolución impugnada, no cuenta
con normativa expresa que permita a los demandados, tomar decisiones modificatorias sobre el
presupuesto aprobado en la Ley Financial para el Tribunal Constitucional; ii) Asimismo, la
reducción del presupuesto del 15% de servicios personales, no fue debidamente fundamentado,
es decir, que no explicó el por qué la reducción de 15% y no del 20% u otro porcentaje, menos
aún fue sustentado jurídicamente; además que el presupuesto no fue objeto de observación por el
Consejo de la Judicatura, formando parte del presupuesto general y el desarrollo, de esa
institución, sus actividades con total normalidad; y, iii) Finalmente la mencionada Resolución
fue emitida sin el quórum correspondiente; porque de acuerdo art. 16 de la Ley del Consejo de la
Judicatura (LCJ), que en ese momento estaba vigente, el pleno del citado Consejo estaba
conformado por cuatro Consejeros más su Presidente que era también Presidente de la Corte
Suprema de Justicia; y, el quórum mínimo que se requería era de al menos tres de sus cinco
miembros, es decir, que la resolución impugnada debió ser suscrita con tres votos, y solo fue con
dos, los mismos que eran insuficientes para emitir la Resolución

Consecuentemente, de lo descrito se colige que los demandados al emitir la Resolución


Administrativa impugnada cometieron un acto ilegal, el mismo que se encuentra vinculado a la
vulneración del derecho al trabajo, a una remuneración justa y al ejercicio de la función pública,
de los funcionarios del Tribunal Constitucional, porque a partir de dicha Resolución y la
exigencia de su cumplimiento, es que no se procesaron las planillas que remitió el Tribunal
Constitucional al Consejo de la Judicatura.

III.5. En relación a la Magistrada Responsable del Tribunal Constitucional codemandada


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 803
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En cuanto a la Magistrada Responsable, los mandantes de los accionantes alegan que la misma,
no hubiese gestionado los mecanismos correspondientes para impugnar el acto ilegal que
ocasionó la vulneración de sus derechos y garantías constitucionales y la cancelación de haberes
del mes de mayo; sin embargo, en obrados consta la nota de 6 de mayo de 2009, mediante la
cual dicha autoridad, manifestó al Presidente de la Corte Suprema y del Consejo de la
Judicatura, que del análisis de la RA 140/09, se deduce que las decisiones allí asumidas, no
surgen de un análisis de la situación institucional del Tribunal Constitucional y que no tiene
fundamentos legales, ni técnico administrativos que les obliguen a cumplir tales
determinaciones; asimismo, consta en obrados notas enviadas al Consejo de la Judicatura por la
Magistrada, solicitando se procese con las planillas de haberes de los meses de mayo y junio, las
mismas que fueron rechazadas pidiendo se adecue a la citada Resolución impugnada; en
consecuencia se evidencia que la codemandada, tramitó los mecanismos necesarios para
impugnar la RA 140/2009 y los sueldos de los funcionarios del Tribunal Constitucional.

Finalmente, en relación a la estabilidad laboral, no es posible tutelar este derecho, por cuanto no
es posible incursionar a pretender garantizar hacia futuro los derechos que se invocan,
respondiendo a cuestiones de orden administrativo que deben ser abordados por funcionarios
competentes y de acuerdo a ley.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber concedido en parte la acción tutelar, ha


actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:

1º APROBAR la Resolución 204/09 de 29 de junio de 2009, cursante de fs. 384 a 389 vta.,
pronunciada por la Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Chuquisaca, en consecuencia:

2° CONCEDER la tutela solicitada, en relación de los demandados, Eddy Walter Fernández


Gutiérrez, Presidente de la Corte Suprema de Justicia y del Consejo de la Judicatura y Rodolfo
Mérida Rendón, Consejero de la Judicatura, al haber vulnerado el derecho al trabajo, a una
remuneración justa de los accionantes; y,

3° DENEGAR la tutela, en cuanto la codemandada Silvia Salame Farjat, Magistrada


Responsable del Tribunal Constitucional; y, también respecto al derecho a la estabilidad laboral
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 804


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0069/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Carmen Silvana Sandoval Landivar
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19822-40-AAC
Departamento: Oruro

En revisión la Resolución 11/2011 de 17 de agosto, cursante de fs. 164 a 171 pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional interpuesta por Simón Alfredo Zambrana Bernal
contra Luis Alberto Aguilar, ex Prefecto y Comandante General; Santos Javier Tito Véliz,
Gobernador; Tomas López Vallarte, Secretario General; y, Omar Caviades Medina,
Encargado Provisión y Dotación de Bienes, respectivamente, todos del Gobierno Autónomo
Departamental de Oruro.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante, mediante memorial presentado el 4 de mayo de 2009, cursante de fs. 33 a 40,


señaló lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 21 de junio de 2001, suscribió un contrato de arrendamiento del inmueble ubicado en calle


Bolívar 757, de propiedad de Maximiliano Vargas Zaconeta, donde se encuentra el "Cine Paláis
Concert"; cuya vigencia fue acordada hasta el 28 de noviembre de 2006. Posteriormente, por
carta notarial notificada el 22 de noviembre de 2007, se le hizo conocer que la entonces
Prefectura del departamento de Oruro, había adquirido el referido inmueble; por ello, se le
conminó a efectuar la entrega de los ambientes que ocupaba; en tal situación, planteo una
demanda de oferta de pago, a objeto de cumplir con la cancelación de los alquileres; sin
embargo, la mencionada Prefectura, rechazó la referida demanda e interpuso interdicto de
adquirir la posesión, la que se encuentra en trámite, al momento de la interposición de la
presente acción, conforme la certificación de 27 de febrero de 2009, en la cual se establece que
no existe ninguna orden de desalojo de los ambientes que ocupa.

Refirió, que pese a existir dos procesos en trámite, en ninguno de los mismos existe
mandamiento de desapoderamiento o de desalojo; por ende, las autoridades y funcionarios
demandadas, acompañadas por un grupo aproximadamente de treinta personas, ejercieron
derecho por mano propia, pues el 16 de febrero de 2009, a horas 11:45, ingresaron de forma
arbitraria en los ambientes "Cine Paláis Concert"; sin ninguna orden judicial de "desalojo";
expulsando a los trabajadores de los ambientes y procedieron a soldar algunas puertas exteriores,
colocando sus propios candados, con el fin de no permitirles el ingreso a estos ambientes.

Por último, añadió que, ante dicho accionar de las autoridades demandadas, elevó carta
notariada ante el Prefecto, solicitando la entrega de los ambientes y que dejaran de enviarle
notas que en el fondo contienen amenazas, que fue pronunciado por el Encargado de Provisión y
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 805
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Dotación de Bienes, al haber sido emitió P.D.B. S 106/2009, rechazando la entrega de los
ambientes.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos a la "seguridad jurídica", a la igualdad ante la


ley, al trabajo, la industria o comercio, a la propiedad y de la garantía al debido proceso, citando
al efecto los arts. 23.I, 14, 46, 47, 56, 117, 119 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita que se le conceda la acción de amparo y se disponga: a) Dejar sin efecto la posesión
arbitraria de los ambientes del "Cine Paláis Concert"; b) Que las autoridades demandadas,
efectúen la entrega de todos los ambientes, así como maquinarias, equipos y materiales; y, c)
Que el ilegal desalojo del inmueble, quede sin efecto y se restituyan los derechos que tiene sobre
el mismo como inquilino o arrendatario.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de agosto de 2011, según consta en el acta cursante de fs.
148 a 163 y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, amplió los siguientes términos: 1) El inmueble actualmente sigue
siendo ocupado y utilizado por los personeros de la actual Gobernación indebidamente, sin
considerar que él era el inquilino junto con el personal que tiene a su cargo; y, 2) Las
autoridades demandadas ordenaron que su defendido deje los ambientes que tomó en alquiler, y
por ende, debieron haber aperturado proceso de desalojo.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionarios demandados

Los representantes de Santos Javier Tito Véliz, actual Gobernador del Gobierno Autónomo de
Oruro, mediante informe escrito cursante de fs. 137 a 139, señalaron lo siguiente; i) Una vez,
que asumió el cargo de Gobernador, en el inmueble denominado "Cine Paláis Concert" no había
ningún inquilino" (sic), sólo tuvo conocimiento de dos notas el 26 de junio de 2011, la que fue
reiterada el 4 de agosto del referido año, que fueron presentadas por el accionante, solicitando
"la devolución del inmueble en su calidad de inquilino comprometiéndose a cancelar los
cánones con quien fuera propietario"; y, ii) Mediante nota G.A.D.OR./S.A.D.A.J.- 786/2011, se
le comunicó que no existía documentación contractual de arrendamiento; por ello, se remitió
antecedentes a la Secretaría del Gobierno Autónomo de Oruro.

Con relación a Luis Alberto Aguilar Calle, ex -Prefecto; Tomas López Vallarte, Secretario
General; Omar Caviades Medina, Encargado Provisión y Dotación de Bienes, no se hicieron
presentes en audiencia ni presentaron el informe escrito ni justificativo alguno de su inasistencia,
no obstante haber sido citados conforme cursa en fs. 82 y vta.

I.2.3. Resolución

Los Vocales de la Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro,
constituido en Tribunal de garantías, pronunciaron la Resolución 11/2011 de 17 de agosto,
cursante de fs. 164 a 171 de obrados, por la que se "denegó" la acción de amparo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 806
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

constitucional, sancionando al accionante con costas y multa de Bs200.- (doscientos bolivianos),


fundamentando su Resolución en los siguientes términos: a) El accionante alegó, que las
autoridades demandadas ingresaron de forma hostil, el 16 de febrero de 2009, a horas 11:45, sin
orden de desalojo al inmueble que ocupaba; sin embargo, de lo referido, no se acredito de
manera objetiva o fehaciente que conste una medida de hecho, b) El accionante alegó que debió
de considerar la reconducción del contrato de alquiler que fue suscrito con el anterior
propietario, empero la Gobernación departamental de Oruro, no tomó en cuenta la mencionada
reconducción ni reconoció el contrato anteriormente referido, por ello, estableció que existen
derechos controvertidos entre ambas partes; que los mismos deben ser dilucidados en la vía
ordinaria y no en la presente acción; y, c) A pesar que el accionante en su momento recurrió a la
vía ordinaria con una petición de pago; la cual fue rechazada por la Gobernación, pudo haber
recurrido a la instancia del interdicto de recobrar la posesión y al no haber hecho uso de la
indicada acción, no corresponde a este Tribunal ingresar a analizar el fondo de la causa.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Por documento privado de contrato de alquiler, de 21 de junio del 2001, suscrito entre
Maximiliano Vargas Zaconeta y el ahora accionante, en la cláusula segunda, se acordó alquiler
de los ambientes del "Cine Pálais Concert", a partir del 28 de noviembre de 2003 hasta el 28 de
noviembre del 2006 (fs. 3 y vta.).

II.2. Mediante carta notarial de 29 de noviembre de 2007, dirigida al Encargado Provisión y


Dotación de Bienes y Servicios, Jesús Guillermo Zambrana Bernal representante del accionante,
felicitó a la Gobernación por ser la nueva propietaria del inmueble en el cual es inquilino (fs. 5).

II.3. Por memorial de oferta de pago, presentado por el representante del accionante, el 30 de
noviembre de 2007, ante el Juez de Instrucción Primero en lo Civil y Comercial del Tribunal
Departamental de Justicia de Oruro, se oferto el pagó de alquileres del inmueble ocupado;
propuesta que fue rechazada por las autoridades demandadas (fs. 6 a 8 y vta.).

II.4. El 21 de enero de 2008, Venancio Zenteno Atanacio y Federico Rodolfo Montoya


funcionarios del Gobierno Departamental Autónomo de Oruro, en su representación,
interpusieron demanda de interdicto de adquirir la posesión, alegando su derecho propietario
referente al inmueble de la calle Bolívar 759, por fotocopia legalizada del testimonio 083/2007,
registrado en Derechos Reales (DD.RR) bajo la matricula 4.01.1.01.0011892 de 24 de octubre
de 2007 (fs. 11 a 12).

II.5. Por nota SDJ 123/2009 de 11 de febrero, Omar Cavidades, Encargado Provisión y
Dotación de Bienes y Servicios del Gobierno Departamental Autónomo de Oruro, solicitó al
accionante que en el plazo de setenta y dos horas a objeto de recoger "TODOS LOS BIENES
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 807
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

QUE TIENE EN LA PROPIEDAD DE LA PREFECTURA DEL DEPARTAMENTO DE


ORURO" (sic) (fs. 22).

II.6. Por certificación de 27 de febrero de 2009, la Actuaria del Juzgado Primero de Instrucción
del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro, informó que; 1) El proceso de interdicto de
adquirir la posesión se encuentra en trámite; 2) Se señaló audiencia para posesionar a
Venancio Zenteno Atanacio y Federico Rodolfo Montoya Aguilar en representación de Luis
Alberto Aguilar, del entonces Prefecto y Comandante del departamento de Oruro; 3) No existe
ninguna resolución que ordene el desalojo de ninguna persona o dependencia del "Cine Paláis
Concert", ni orden de allanamiento o colocado de candados a los ambientes del referido Cine,
que tampoco se ordenó a funcionarios de la Gobernación para que efectúen el allanamiento (fs.
17).

II.7. El accionante mediante nota de 4 de marzo de 2009, solicitó a Alberto Luis Aguilar, ex-
Prefecto del departamental de Oruro, la devolución de los ambientes del "Cine Paláis Concert" y
que instruya a sus funcionarios, que dejen de enviar notas que contienen amenazas. Dicha
solicitud mereció informe P.D.B.S. 106/2009 de 19 de marzo (fs. 18 a 21).

II.8. El accionante, por nota de 4 de marzo de 2009, pidió al Gobernador de Oruro, dejara de
emitir amenazas y conminatorias contra su persona (fs. 22).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante considera que las autoridades demandadas vulneraron sus derechos a la "seguridad
jurídica", a la igualdad de partes ante la ley, al trabajo, a la industria o comercio, de la propiedad
privada y al debido proceso, toda vez, que al ser inquilino del inmueble en el cual funcionaba el
"Cine Paláis Concert", le hicieron conocer a través de una carta notariada que el referido
inmueble fue trasferido al Gobierno Autónomo Departamental de Oruro; por ello, instauró
proceso de orden de pago a efectos de regularizar las respectivas cancelaciones con el nuevo
propietario; sin embargo, la Gobernación, por su parte interpuso proceso de interdicto de
adquirir la posesión, que se encuentra en trámite; posteriormente, el 16 de febrero de 2009,
personeros de esa institución gobernación y un grupo de treinta personas, procedieron al
cambiado de chapas y a desalojar a sus trabajadores, sin ninguna orden de desalojo. En
consecuencia corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder
o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y fines de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, ha sido instituida como una acción de defensa que otorga
protección contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los
derechos y garantías fundamentales de la persona reconocidos por la Constitución Política del
Estado y la ley, y puede ser activada siempre que no exista otro medio o recurso legal para la
protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados, así se
tiene en virtud a lo dispuesto por los arts. 128 y 129.I de la CPE.

III.2. Vías de hecho en la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es un medio reparador ante actos o situaciones


excepcionales de medidas de hecho, por lo cual es oportuno invocar la SC 0148/2010-R de 17
de mayo, referido a las medidas de hecho que señaló que son: "…los actos ilegales arbitrarios
que desconocen y prescinden de las instancias legales y procedimientos que el ordenamiento
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 808
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

jurídico brinda, realizando justicia directa, con abuso del poder que detentan frente al
agraviado, actos que resultan ilegítimos por no tener respaldo legal alguno y que por el daño
ocasionado y la gravedad de los mismos, merecen la tutela inmediata que brinda el amparo por
vulnerar derechos fundamentales…"; y en cuanto a los fundamentos de la prescindencia de la
subsidiariedad agregó que: "La idea que inspira la protección no es otra que el control al
abuso del poder y el de velar por la observancia de la prohibición de hacerse justicia por mano
propia, control que se extiende tanto a las autoridades públicas como a los particulares que lo
ejercen de manera arbitraria por diferentes razones y en determinadas circunstancias…".

La Sentencia mencionada estableció a la vez, la posibilidad excepcional de analizar el fondo del


asunto cuando se está frente a vías o medidas de hecho, actos por los cuales se activa esta acción
de defensa con la finalidad de otorgar protección inmediata y para ello definió los alcances y
requisitos para su consideración a través de la acción de amparo constitucional, haciendo
abstracción de las exigencias procesales, en ese entendido determinó que evidentemente
"…existen situaciones excepcionales en las que el agotamiento de tales vías implicaría la
consumación irreversible de la vulneración del derecho, con el consiguiente daño irremediable,
en cuyo caso la tutela resultaría ineficaz, en el que por la existencia de acciones de hecho o
justicia directa o a mano propia, que puede ser proveniente de parte de autoridades o
funcionarios públicos, o de particulares, se hace urgente la tutela inmediata, prescindiendo de
las vías legales que pudiesen existir, a efectos de que cesen las ilegalidades y actos hostiles, con
la consiguiente afectación inclusive de otros derechos fundamentales, por tanto en esos casos
corresponde ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada".

III.3. Requisitos que se deben considerar para determinar una medida de hecho

La citada SC 0148/2010-R, dejó presente que existen requisitos para considerar la situación
como medida de hecho y hacer abstracción de las exigencias procesales, como ser:

"1) Debe existir una debida fundamentación y acreditación objetiva de que efectivamente se
está frente a una medida de hecho o justicia a mano propia, donde el agraviado o accionante se
encuentre ante una situación de desprotección o desventaja frente al demandado, o agresor, sea
autoridad, funcionario o particular o grupo de personas, por la desproporcionalidad de los
medios o acción; la presentación de la acción de amparo constitucional debe ser de manera
oportuna e inmediata, haciendo abstracción de la subsidiariedad. De lo contrario no justificaría
la premura ni gravedad y deberá agotar las instancias jurisdiccionales o administrativas
pertinentes según sea el caso, y agotadas las mismas, acudir a la jurisdicción constitucional.

2) Necesariamente se debe estar ante un inminente daño irreversible o irreparable, ya sea


agravando la lesión ya consumada, o que ello provoque la amenaza de restricción o supresión a
otros derechos fundamentales. Situaciones que deben ser fundamentadas y acreditadas.

3) El o los derechos cuya tutela se pide, deben estar acreditados en su titularidad; es decir, no
se puede invocar derechos controvertidos o que estén en disputa, atendiendo claro está, a la
naturaleza de los mismos.

4) En los casos en que a través de medios objetivos se ponga en evidencia que existió
consentimiento de los actos denunciados y acusados como medidas de hecho, no corresponde
ingresar al análisis de la problemática, por cuanto esta acción de defensa no puede estar a
merced del cambio o volatilidad de los intereses del accionante. Sin embargo, cuando el
agraviado o accionante señale que existen actos de aparente aceptación, pero que son producto
de la presión o violencia que vició su voluntad, ésta situación debe ser fundamentada y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 809


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

acreditada de manera objetiva, en ese caso, será considerada una prueba de la presión o
medida de hecho, inclusive".

Dentro de ese contexto jurisprudencial asumido por el Tribunal Constitucional ninguna


autoridad pública o persona particular puede valerse de su poder y atentar contra cualquier
ciudadano.

III.4. Análisis del caso de autos

El accionante, expresa que el 21 de junio de 2001, suscribió un contrato de arrendamiento del


inmueble ubicado en calle Bolívar 757, hasta el 28 de noviembre de 2006, de propiedad de
Maximiliano Vargas Zaconeta, donde funcionaba el "Cine Paláis Concert"; posteriormente, el 22
de noviembre de 2007, por carta notarial se le comunicó que el mencionado inmueble fue
transferido a la Gobernación, por lo que instauró un proceso de orden de pago, con el fin de
cancelar los cánones de alquiler, el mismo que fue rechazado por las autoridades demandadas y
éstos interpusieron la demanda de adquirir la posesión contra el accionante, mismo que se
encuentra en trámite; sin embargo, el 16 de febrero de 2009, las autoridades demandadas y un
grupo de treinta personas, se apersonaron al inmueble que ocupaba y procedieron a efectuar el
cambio de chapas y a desalojar a sus trabajadores, sin ninguna orden ni mandamiento de
desalojo; y a consecuencia de esta situación, mediante notas reclamó dichas ilegalidades y
solicitó la entrega de los ambientes al Gobernador demandado; empero dicha Resolución fue
rechazada.

A efectos de resolver el presente caso, es preciso analizar si las autoridades demandadas,


cometieron o no medidas de hecho contra el accionante, para ello, es necesario tomar en cuenta
el razonamiento descrito en el Fundamento Jurídico III.3, en cuanto a los cuatro requisitos que
se debe cumplir para que una situación se pueda considerar como medida de hecho, por lo tanto
se desarrollará a continuación dicho entendimiento en el caso concreto.

Con relación al primer requisito, el accionante en la demanda, alega de manera clara y precisa
las medidas de hecho realizada por las autoridades demandadas; ahora si bien, las autoridades
demandadas pese a su legal notificación, no se presentaron en audiencia, ni emitieron informe
alguno, para desvirtuar lo relatado por el accionante, se debe entender que si sucedieron los
hechos descritos por el accionante; asimismo, corroborando esta situación, en obrados se adjunta
la nota enviada por la Gobernación de 11 de febrero de 2009, conminando al accionante para
que en el plazo de setenta y dos horas desocupe los ambientes y las notas enviadas por el
accionante al Gobernador de 4 y 19 de marzo de 2009, solicitando "la entrega de los ambientes
que fueran abusivamente ocupados por sus dependientes y que se deje de enviar notas que
contienen amenazas" (sic); en cuanto al segundo requisito, el accionar de los funcionarios de la
Gobernación, provocó un daño irreversible e irreparable al accionante, pues al haberse cerrado el
lugar en el cual funcionaba el "Cine Paláis Concert" e impedido el ingreso de los trabajadores,
vulnerando sus derechos fundamentales alegados; con referencia al tercer requisito, no existe
derechos controvertidos en el presente caso, ya que se tiene claramente establecido el derecho
propietario que tiene la gobernación; y, finalmente, en cuanto al último requisito no existe
consentimiento de los actos denunciados y acusados como medidas de hecho.

Consecuentemente de lo alegado anteladamente, se evidencia que si existieron medidas de


hecho, cometidas por las autoridades demandadas, por lo que corresponde conceder la tutela
solicitada.

Por lo expuesto, el Tribunal de garantías al haber denegado la presente acción de amparo no


obró correctamente.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 810
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución 11/2011 de 17 agosto, cursante de fs. 164 a 171, pronunciada por los
Vocales de la Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro; y
en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada de manera provisional, únicamente respecto a
las acciones de hecho asumidas por el Gobierno Autónomo Departamental de la ciudad de
Oruro, mientras se resuelva el interdicto de adquirir la posesión que se encuentra en proceso.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez .-Magistrado
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar.-Magistrada
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco .-Magistrada
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales .-Magistrado
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0070 /2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20598-42-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional,


interpuesta por Jael López Flores contra Iván Wilfredo Villa Bernal, Director del Servicio
Departamental de Educación (SEDUCA) de Cochabamba y Nicolás Siles Pancorbo,
Director Distrital de Educación de la provincia Cercado del mismo Departamento.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

La accionante mediante memorial presentado el 17 de agosto de 2009, cursante de fs. 54 a 58 de


obrados, refiere que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Fue ilegalmente destituida como catedrática de las asignaturas de mecanografía computarizada,


inglés técnico y relaciones humanas del Instituto Superior de Comercio "Federico Álvarez Plata";
cargo en el que fue designada después de haber resultado ganadora en la convocatoria pública
emitida para el efecto. En reclamo a esa determinación, acudió a todas las instancias pertinentes sin
tener éxito alguno que repare el hecho ilegal cometido por las autoridades demandadas, es así que
finalmente ante el acto administrativo plasmado en la nota SDECEI-OF 305/09 de 23 de junio de
2009, presento recurso de revocatoria dentro del plazo legal, es decir, a los dos días de su
notificación, pero hasta la fecha de interposición de la acción, no recibió notificación alguna, a
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 811
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

pesar de haber vencido los plazos establecidos en el art. 31.III del Reglamento de Recursos de
Revocatoria y Jerárquicos para la Carrera Administrativa, aprobado por Decreto Supremo (DS)
26319 de 15 de septiembre de 2011.

Al no tener respuesta alguna, consideró que el recurso de revocatoria fue denegado, por ello el 22
de julio de 2009, al amparo de los arts. 31.III y 33 del citado Reglamento, planteó recurso
jerárquico del que tuvo conocimiento el Director Departamental como superior jerárquico; sin
embargo, al no haber elevado antecedentes en el plazo de dos días el Director Distrital de
Educación, se le denegó también ese recurso, con lo cual fueron agraviados sus derechos
constitucionales.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

La accionante considera vulnerados sus derechos a la "seguridad jurídica", a la dignidad, a la salud,


al trabajo, a la defensa y a la garantía del debido proceso, citando al efecto los arts. 13.II, 21.2, 22,
35, 37, 46, 117 y 119.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se le conceda tutela y se ordene a las autoridades demandadas que en el día le restituyan al
cargo de docente en las asignaturas de mecanografía computarizada y relaciones humanas, en las
mismas condiciones en las que venía desempeñando esa función antes de su ilegal destitución,
debiendo condenárseles a la reparación de daños y perjuicios, traslúcidos en el pago de sus salarios
correspondientes a los meses de marzo, abril, mayo, junio, julio y agosto de 2009, además de
imponerles responsabilidad administrativa, civil e incluso penal por los actos ilegales en que
incurrieron, así como al pago de costas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública de acción de amparo constitucional el 17 de septiembre de 2009,


según consta en el acta cursante de fs. 98 a 99 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La accionante a través de su abogado, ratificó los términos de su acción de amparo


constitucional, agregando que: a) La única explicación a su despido es haber recibido
instrucciones superiores; y, b) Presentó un recurso de revocatoria que ni siquiera fue
considerado por la autoridad demandada Nicolás Siles Parcorbo, ni elevó a conocimiento del
codemandado Iván Wilfredo Villa Bernal, Director del SEDUCA, respecto al pronunciamiento
del fallo, por lo que ante el silencio administrativo, presenta un recurso jerárquico; empero, el
Director Departamental ni siquiera se inmutó en conceder el mismo.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

La abogada y representante de Ivan Wilfredo Villa Bernal, Director del SEDUCA de


Cochabamba, mediante informe escrito, cursante de fs. 80 a 81 vta., señalo lo siguiente: 1) El 17
de marzo de 2009, la accionante presentó un memorial dirigido a su mandante, solicitando que
se considere la injusta e irracional determinación del Director Distrital de Educación de
Cercado, quien dispuso del cargo que desempeñaba con el argumento de estar ejerciendo
funciones en calidad de invitada por no cumplir con los requisitos para el cargo y por no
encontrarse inscrita en el escalafón de docentes; dicho memorial fue respondido con el informe
UAJ-ALE-INF 070/09 de 1 de junio del citado año, el cual se dispuso que sea de conocimiento
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 812
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de la interesada por lo que se remitió con una nota de atención a la Ventanilla Única de trámites
del SEDUCA, sin que "hasta la fecha" la accionante hubiera recogido la respuesta; similar
situación ocurrió con el memorial de solicitud de respuesta, a nota de 22 de junio de 2009, que
mereció el informe 154/09 de 29 del referido mes y año, emitido por el Director Distrital de
Educación de Cercado, que también fue derivado a Ventanilla Única de trámites sin que hubiera
sido recogido por la accionante; 2) El 21 de julio del indicado año, la accionante presentó
recurso jerárquico, que mereció respuesta mediante oficio SEDUCA-UAJ-CITE- 04/2009 de 10
de agosto, en el cual se le indicó que debía acompañar la Resolución Administrativa del recurso
de Revocatoria que fue dictada por el Director Distrital de Educación de Cercado, con cuya
respuesta, se tramitaría el recurso jerárquico y se le haría conocer en los plazos
correspondientes, habiendo sido notificada con la mencionada nota el 13 de agosto de 2009; sin
embargo, hasta la fecha la accionante no acompañó la Resolución señalada, lo que impide el
pronunciamiento dentro del plazo establecido por el art. 67 de la Ley de Procedimiento
Administrativo (LPA); 3) El trámite del recurso jerárquico aún se encuentra pendiente, por lo
que en aplicación del principio de subsidiariedad del amparo constitucional, no corresponde
otorgar la tutela pretendida; y, 4) El DS 26319 de 15 de septiembre de 2001, citado por la
accionante, no es aplicable por cuanto desde la vigencia de la Ley de Procedimiento
Administrativo de 23 de abril de 2002 y de su Reglamento aprobado por DS 27113 de 23 de
julio de 2003, los recursos de revocatoria y jerárquico se rigen por dichas normas y el plazo de
noventa días establecido para resolver el recurso jerárquico, aún está vigente.

Por su parte, el abogado y apoderado del Director Distrital de Educación de Cercado, mediante
informe escrito, cursante de fs. 93 a 97, señaló lo siguiente: i) El SEDUCA, emitió convocatoria,
a la cual se presentó la accionante, para el cargo de catedrática del INCOS SECCIÓN
NOCTURNA (gestión 2005); sin embargo, al presente se verificó la documentación, observando
que la accionante no cumplió con los requisitos exigidos en la referida convocatoria, pues al
momento de realizarse la compulsa, no contaba con experiencia de tres años en el área de
docente, que se desempeñaba como Secretaria del Instituto Superior de Comercio "Federico
Álvarez Plata", lo que no le permitía habilitarse como postulante al cargo, por lo que sólo ocupó
la función de catedrática como invitada y no como institucionalizada, mientras se convoque
nuevamente para que se postulen docentes que cumplan con los requisitos; motivo por el cual se
realizó un reordenamiento para reubicar a la accionante como Secretaria en un Centro Educativo
nocturno; y, ii) No es evidente que se hubiera agraviado la dignidad de la accionante porque en
ningún momento fue tratada mal o se menoscabó su dignidad, tampoco es cierto que no se
hubiese pronunciado sobre los recursos que planteó, mas al contrario no se apersonó a recoger,
puesto que se le cursó respuesta en sentido de que debía adjuntar la Resolución Administrativa
del recurso de revocatoria dictada por el SEDUCA; iii) Los recursos planteados por la
accionante no se ajustan a derecho, además que la acción de amparo constitucional no puede ser
planteada si no se agotaron los recursos que franquea la ley, máxime si en el caso presente aún
no se dictó la Resolución del recurso jerárquico planteado por la accionante, teniendo en cuenta
que según el art. 64 de la LPA, el recurso de revocatoria se plantea en el plazo de diez días y la
autoridad tendrá veinte días para resolverlo y que conforme dispone el art. 66 de la citada
norma, el recurso jerárquico debe ser planteado ante la misma autoridad que resolvió el recurso
de revocatoria y no directamente ante la autoridad superior como lo hizo la accionante, debiendo
la autoridad superior resolver en el plazo de noventa días, lo que significa que aún está vigente
dicho plazo; consiguientemente, la accionante no agotó todos los medios y recursos ordinarios;
y, iv) La accionante al margen de no recoger la respuesta a su recurso de revocatoria, nunca
presentó recurso jerárquico ante el SEDUCA de Cercado, además que no tomó en cuenta que la
carrera del Magisterio se regula por su propia legislación especial y no por el Estatuto del
Funcionario Público.

I.2.3.Resolución
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 813
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

La Sala Penal Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Cochabamba, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución de 16
de septiembre de 2009, cursante de fs. 100 a 102, declarando "procedente" en parte el
"recurso" de amparo constitucional y dispuso: 1) La inmediata restitución de la accionante al
cargo de catedrática en las asignaciones: mecanografía computarizada, ingles técnico y
relaciones humanas, en el Instituto Superior de Comercio 2 "Federico Álvarez Plata", con el
reconocimiento de los haberes dejados de percibir desde el momento de la intempestiva
interrupción de sus funciones; y, 2) La nulidad de obrados, debiendo las autoridades
administrativas "recurridas", en caso de proceder a la revisión de la designación, sujetarse a las
normas administrativas que rigen para la destitución de los servidores públicos, el fallo se basó
en los siguientes argumentos: a) Existen normas administrativas que regulan el inicio,
desempeño y cesación de las funciones de los servidores públicos y con respectiva claridad
establecen su procedimiento; b) A través de la certificación expedida por el Instituto Superior de
Comercio 2 "Federico Álvarez Plata", se verificó que la accionante desempeñó sus funciones, a
partir de 2005 hasta el 2008, siendo destituida de sus funciones el 12 de marzo de 2009, por
comunicación efectuada vía teléfono bajo el argumento que "había sido cesada de sus funciones
y que otra persona ocuparía partir de mencionada fecha su cargo" (sic), sin importar que dicha
actitud es contraria a lo dispuesto en el Estatuto del Funcionario Público, que prohíbe despidos
discrecionales, sin dar una justificación adecuada sobre los motivos por los que se le destituía de
su funciones; y, c) La nota SDECEI-OFI-305/09 y la respuesta SDECEI-OFI- 326/09, no
constituyen "Resoluciones Administrativas" por ello, no se pueden considerar acto
administrativo de cesación de funciones y menos de resolución de un recurso de revocatoria, de
tal forma, se aperturó un proceso confuso, induciendo a la accionante a incurrir en error
debiendo existir un ambiente de confianza y cordialidad entre los actos, las decisiones del
Estado y el servidor público, como también las actuaciones de los particulares con las
autoridades públicas, con el fin de que exista mutua confianza y exista respeto en las decisiones
o resoluciones obtenidas de las autoridades públicas.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resoluciones dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis del expediente y de la prueba aportada, se concluye lo siguiente:

II.1. A través de la Resolución Administrativa (RA) A-07 de 11 de diciembre de 2003, expedida


por la Unidad de Administración de Recursos del SEDUCA en consideración de que la
accionante Jael López Flores al tener cinco años de servicio administrativo y haber aprobado el
examen de ascenso de categoría, dispuso su inscripción en el escalafón nacional del magisterio,
asignándole la categoría quinta a partir de enero de 2003 (fs. 8).

II.2. El 1 de abril de 2005, el Instituto Nacional de Maestros Normalistas, emitió convocatoria


para el cargo de Secretariado Ejecutivo en las asignaturas de mecanografía computacional,
relaciones humanas e Inglés Técnico, habiendo la accionante obtenido el mayor puntaje (fs. 9 a
10).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 814


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.3. Por memorando de 1 de abril de 2005, expedido por la Directora del SEDUCA de Cercado,
la accionante fue designada catedrática del Instituto Nacional de Comercio Sección Nocturna, de
acuerdo al memorando ítem es 1072 (fs. 11).

II.4. La accionante por memorial de 17 de marzo de 2009, solicitó al Director Departamental de


Educación, que considere la injusta e irracional destitución de la que fue objeto; pedido que fue
reiterado mediante nota de 24 de marzo del indicado año (fs. 14 a 15 y 17).

II.5. Por memorial presentado el 14 de abril de 2009, la accionante reclamó al Director del
SEDUCA de Cercado, por la determinación de apartarla del cargo de catedrática en el Instituto
Superior de Comercio "Federico Álvarez Plata", solicitando que se reconozca la legalidad de su
designación mediante memorando de 1 de abril de 2005 y se disponga la inmediata restitución a
su cargo; petición que fue reiterada por memorial de 16 de junio del indicado año (fs. 30 a 33 y
vta. y 34).

II.6. Mediante informe UAJ-ALE-INF-049/09 de 25 de mayo, el Jefe de la Unidad de Asesoría


Legal del SEDUCA, hizo conocer al Director de esa entidad, que la accionante para continuar en
el cargo de docente de la carrera de Secretariado Ejecutivo del Instituto Nacional de Comercio
"Federico Álvarez Plata", debe estar inscrita en el escalafón docente, aprobar el examen de
idoneidad para continuar en la carrera docente y que según la documentación que adjuntó,
pertenece a la carrera administrativa al no ser profesora egresada de la Normal, por lo que no
procede su solicitud (fs. 26 a 28).

II.6. El 23 de junio de 2009, el Director del Servicio Distrital de Educación emitió la nota
305/09, dirigida a la accionante, señalando que al momento de la convocatoria al cargo, no
contaba con el requisito de tres años de experiencia en el área docente, concluyendo que en su
calidad de Secretaria del Instituto Superior de Comercio 2 "Federico Álvarez Plata", no
pertenece a ninguna categoría del escalafón docente, toda vez que no es maestra, por lo que no
puede ejercer el cargo sin contar con un título que acredite ser docente (fs. 37 a 38).

II.7. El 25 de junio de 2009, la accionante interpuso recurso de revocatoria, ante el Director del
Servicio Distrital de Educación, indicando que se sometió a una convocatoria pública para optar
el cargo de catedrática de las asignaciones de mecanografía computarizada, inglés técnico y
relaciones humanas, siendo designada en el mismo, el 1 de abril de 2005; habiendo ejercido
dicha función hasta que de manera sorpresiva fue destituida de su cargo, por ello, solicitó que se
remitan antecedentes al superior jerárquico para que revoque la ilegal determinación (fs. 39 a
40).

II.8. El 17 de julio de 2009, el Director Distrital de Educación, emitió la nota 326/09,


respondiendo al memorial del recurso de revocatoria presentado por la accionante, señalando
que el Estatuto del Funcionario Público no es aplicable al Magisterio Público que se regula por
su legislación especial y que la impugnación de las actuaciones administrativas deben sujetarse a
la Ley de Procedimiento Administrativo; asimismo, señaló que la accionante no reúne los
requisitos para pertenecer a la carrera docente y que es atribución de su Dirección la
contratación, designación de docentes y personal de apoyo, recordándole que en una reunión
sostenida le planteó la reasignación del cargo como secretaria de una unidad educativa, en el
turno de la noche, el cual fue rechazado. Según el informe de las autoridades demandadas, dicha
nota no fue recogida por la accionante de la ventanilla única de trámites (fs. 86 a 87).

II.9. El 21 de julio de 2009, la accionante planteó recurso jerárquico ante el Director


Departamental de Educación, señalando que no recibió respuesta al recurso de revocatoria

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 815


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

planteado ante el Director Distrital de Educación, y solicita que se eleven obrados ante la
autoridad superior en el término de ley (fs. 41).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante considera vulnerados los derechos a la "seguridad jurídica", a la dignidad, a la salud,


al trabajo, a la defensa y la garantía al debido proceso, toda vez que fue destituida ilegalmente del
cargo de catedrática de las asignaturas de mecanografía computarizada, inglés técnico y relaciones
humanas al que accedió en el Instituto Nacional de Comercio "Federico Álvarez Plata", como
resultado de la convocatoria pública emitida para el efecto; no obstante haber reclamado y pedido
la revocatoria de dicha determinación, no hubo pronunciamiento alguno, por lo que acogiéndose al
silencio administrativo interpuso recurso jerárquico que tampoco fue resuelto, puesto que ni
siquiera fue elevado al superior jerárquico. En consecuencia corresponde en revisión, verificar si
tales extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica y fines de la acción de amparo constitucional

El amparo constitucional, como un recurso extraordinario, se encuentra previsto en el art. 128 de


la CPE, se configura como acción de amparo constitucional que otorga protección inmediata "…
contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual
o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución Política del Estado y la ley"; siempre que no existiera otro medio o recurso
legal para la protección inmediata de esos derechos y garantías, restringidos, suprimidos o
amenazados.

III.2. El carácter subsidiario del amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, está prevista en el art. 129.I de la CPE, refiere que: "…se
interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por
la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal
competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los
derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados", de donde se establece que dicha
exigencia no puede ser soslayada por las partes; asimismo, la SC 1372/2011-R de 30 de
septiembre, indicó que el amparo constitucional es: "…subsidiario porque no puede ser
utilizado si previamente no se agotaron la vías ordinarias de defensa, y supletorio porque viene
a reparar y reponer las deficiencias de esa vía ordinaria. En consecuencia, para que los
fundamentos de una demanda de amparo constitucional puedan ser analizados en el fondo, la
parte recurrente debe haber utilizado hasta agotar todos los medios y recursos legales idóneos
para la tutela de sus derechos sea en la vía jurisdiccional o administrativa…".

Por su parte, la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre, determinó las siguientes reglas y


subreglas de improcedencia del amparo por subsidiariedad cuando: "1) las autoridades
judiciales o administrativas no han tenido la posibilidad de pronunciarse sobre un asunto
porque la parte no ha utilizado un medio de defensa ni ha planteado recurso alguno, así: a)
cuando en su oportunidad y en plazo legal no se planteó un recurso o medio de impugnación y
b) cuando no se utilizó un medio de defensa previsto en el ordenamiento jurídico; y 2) las
autoridades judiciales o administrativas pudieron haber tenido o tienen la posibilidad de
pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios de defensa, así: a) cuando se planteó el
recurso pero de manera incorrecta, que se daría en casos de planteamientos extemporáneos o
equivocados y b) cuando se utilizó un medio de defensa útil y procedente para la defensa de
un derecho, pero en su trámite el mismo no se agotó, estando al momento de la interposición
y tramitación del amparo, pendiente de resolución…" (Las negrillas son nuestras).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 816
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

De lo anteriormente mencionado, se extracta que antes de recurrir a la acción de amparo


constitucional, previamente se debió agotar las vías ordinarias de defensa jurisdiccional o
administrativa, posteriormente recién acudir a la vía constitucional.

III.3. Estructura organizativa y funcional del SEDUCA

Antes de analizar si en el presente caso se hubieran agotado las instancias de impugnación


previstas para el efecto, corresponde analizar la estructura del SEDUCA, que conforme se
establece en la SC 956/2002-R de 13 agosto noviembre, que fue reiterada por la SC 0328/2007-
R de 26 de abril, que no contradice a la Constitución Política del Estado y las leyes vigentes,
refiere que:"…en el marco de la Ley 1654 de 28 de julio de 1995, de Descentralización
Administrativa (LDA), se promulga el Decreto Supremo (DS) 25060 de 2 de junio de 1998,
sobre la Estructura de las Prefecturas de Departamento, que en su art. 2.VI, prevé entre sus
niveles, las Direcciones Departamentales y Servicios Departamentales, entre los cuales se
encuentra la Dirección de Desarrollo Social y el Servicio Departamental de Educación
respectivamente y si bien la autoridad a cargo de la Dirección de Desarrollo Social sólo tiene
como función 'Supervisar el cumplimiento de objetivos y resultados de los servicios
departamentales de Salud, Educación y Gestión Social', no es menos cierto, que por disposición
del mismo Decreto y lo estipulado en el art. 2 del DS 25232 de 27 de noviembre de 1998, de
Organización, atribuciones y funcionamiento del Servicio Departamental, el Servicio
Departamental de Educación (SEDUCA), es un órgano operativo y desconcentrado de la
Prefectura del Departamento, con competencia de alcance departamental, que depende del
Prefecto y funcionalmente del Director de Desarrollo Social de la Prefectura, lo que quiere
decir, que para el caso de que exista un reclamo en cuanto a las peticiones que el Director
Departamental o Distrital, negaran indebidamente, el peticionante puede acudir al Director de
Desarrollo Social de la Prefectura e incluso al Prefecto" .

Asimismo, la misma SC 1191/2006-R, de 28 de noviembre, citada establece que: "… los


funcionarios del Servicio de Educación que consideren afectados algunos de sus derechos
fundamentales por causas relacionadas a la permanencia en sus cargos, tienen que reclamar la
vigencia y respeto de éstos ante las autoridades del sector, pues éstos tienen potestad para
asumir las medidas en defensa de los derechos de los funcionarios, que fueren lesionados o
violados por alguno de los niveles de la organización administrativa del propio SEDUCA".

Complementando ese razonamiento, la citada Sentencia Constitucional más adelante concluyó:


"… en consecuencia, desde la vigencia de la Ley de Procedimiento Administrativo, las vías
recursivas contra todo acto administrativo emanado de las instancias del Poder Ejecutivo, entre
las cuales se encuentran las Prefecturas de Departamentos, todas sus Direcciones y Servicios, y
por ende el Servicio Departamental de Educación y sus niveles inferiores, son el recurso de
revocatoria ante la propia autoridad que emitió un acto ilegal, y luego el recurso jerárquico
ante la autoridad superior, con lo que concluye la vía administrativa, pudiendo luego recién
acudir ante la jurisdicción constitucional. "…el mismo emerge de la aplicación de
razonamientos efectuados en anteriores Sentencias Constitucionales, emitidas en forma previa a
la vigencia de la Ley de Procedimiento Administrativo 2341 de 23 de abril de 2002, vigente
desde el 25 de julio de 2003, conforme determinó su Disposición Final Segunda, modificada por
el art. 15 de la Ley 2446; en consecuencia, la jurisprudencia anotada tomó como vías de
reclamación administrativa las reconocidas por el Decreto Supremo (DS) 23951; empero, las
normas previstas por el art. 56 de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), establecen
que todo acto administrativo sólo puede ser impugnado por medio de los recursos
administrativos que la propia Ley determina que son el recurso de revocatoria y el jerárquico
(arts. 64 y 66 de la LPA); en consecuencia, desde la vigencia de la Ley de Procedimiento
Administrativo, las vías recursivas contra todo acto administrativo emanado de las instancias
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 817
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

del Poder Ejecutivo, entre las cuales se encuentran las Prefecturas de Departamentos, todas sus
Direcciones y Servicios, y por ende el Servicio Departamental de Educación y sus niveles
inferiores, son el recurso de revocatoria ante la propia autoridad que emitió un acto ilegal, y
luego el recurso jerárquico ante la autoridad superior, con lo que concluye la vía
administrativa, pudiendo luego recién acudir ante la jurisdicción constitucional".

Del entendimiento jurisprudencial glosado precedentemente se tiene que, a efectos de la


subsidiariedad, se considera agotada la vía administrativa con la presentación del recurso de
revocatoria ante la autoridad que emitió un acto ilegal y la posterior interposición del recurso
jerárquico ante la autoridad superior.

Respecto a este entendimiento, cabe aclarar que para considerar agotada la vía administrativa, no
sólo será suficiente haber presentado el recurso jerárquico, sino que haya sido resuelto, o en su
caso, que haya transcurrido el plazo que la ley establece para resolver el mismo.

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso que se analiza, la accionante denuncia haber sido ilegalmente destituida de su cargo
de catedrática en las asignaturas de mecanografía computarizada, inglés técnico y relaciones
humanas, en el que fue designada, luego de ser la ganadora de una convocatoria pública emitida
para dicho cargo por el Instituto Superior de Comercio "Federico Álvarez Plata" y que no obstante
haber interpuesto recurso de revocatoria ante el Director Distrital de Cercado, dicha autoridad no
resolvió el mismo, ante cuyo silencio administrativo, planteó el recurso jerárquico presentado ante
el Director Departamental de Educación de Cochabamba, quien tampoco emitió pronunciamiento
alguno.

Ahora bien, conforme establecen los arts. 64 y ss. de la LPA, modificada por Ley 3076 de 20 de
junio de 2005, el recurso de revocatoria deberá ser interpuesto por el interesado ante la autoridad
administrativa que pronunció la resolución impugnada, dentro del plazo de diez días siguientes a
su notificación, debiendo ser resuelto en el término de veinte días, y vencido el plazo no se
dictare resolución, el recurso se tendrá por denegado pudiendo el interesado interponer el
recurso jerárquico ante la misma autoridad administrativa competente para resolver el recurso de
revocatoria, dentro del plazo de diez días siguientes a su notificación, o al día en que se venció
el plazo para resolver el recurso de revocatoria, quien en el plazo de tres días deberá remitir a la
autoridad competente el recurso y sus antecedentes para su conocimiento y resolución, a ser
pronunciada en el plazo de noventa días, computable a partir de la interposición del recurso. Si
vencido dicho plazo no se dicta resolución, el recurso se tendrá por aceptado y en consecuencia
revocado el acto recurrido, bajo responsabilidad de la autoridad pertinente.

De la revisión de actuados procesales, se tiene que el 25 de junio de 2009, la accionante interpuso


recurso de revocatoria, ante el Director Distrital de Educación, impugnando la determinación de
apartarla de su cargo de catedrática de las asignaciones de mecanografía computarizada, inglés
técnico y relaciones humanas, que ejercía desde el 1 de abril de 2005; autoridad que en lugar
resolver el referido recurso, por nota SDECEJ-OFI- 326/09 de 17 de julio de 2009, remitida a la
Ventanilla Única de trámites, señaló que el Estatuto del Funcionario Público no es aplicable al
Magisterio Público que se regula por su legislación especial y que la impugnación de las
actuaciones administrativas deben sujetarse a la Ley de Procedimiento Administrativo;
asimismo, señaló que la accionante no reunía los requisitos para pertenecer a la carrera docente
y que era atribución de su Dirección la contratación y designación de docentes y personal de
apoyo, recordándole que en una reunión sostenida le planteó a la accionante la reasignación del
cargo como Secretaria de una unidad educativa, en el turno de la noche. Posteriormente, el 21 de
julio de 2009, la accionante planteó recurso jerárquico ante el Director Departamental de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 818
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Educación, de donde se concluye que aún se encuentra pendiente la resolución de dicho recurso,
pues desde la fecha de interposición del recurso jerárquico (21 de julio de 2009), hasta la
interposición de la presente acción de amparo constitucional (17 de agosto de 2009), no
transcurrió el plazo de noventa días que el art. 67.I de la LPA, establece para que la autoridad
jerárquica resuelva el recurso; consiguientemente en aplicación del principio de subsidiariedad
establecido en los fundamentos que preceden, así como del entendimiento expresado respecto al
agotamiento de la vía administrativa de reclamo, no es posible analizar el fondo de la
problemática planteada en esta acción tutelar, puesto que la accionante utilizó un medio de
defensa útil y procedente para la defensa de sus derechos, pero que en su trámite el mismo no se
agotó.

Por lo expuesto, el Tribunal de garantías al haber declarado "procedente" la acción de amparo


constitucional, no ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales, ni ha
dado cabal aplicación a las normas que rigen a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución de 16 de septiembre de 2009, cursante a fs. 100 a 102 de obrados,
pronunciada por la Sala Penal Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial, -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Cochabamba, en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0072/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19461-39-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 018/2011 de 11 de mayo cursante de fs. 99 a 102, pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional interpuesta por Julia Marcela Sumi de Ayala contra
María Consuelo Chacón Schmidt de Méndez, Jueza Tercera de Partido en lo Civil y
Comercial de la Corte Superior del Distrito Judicial- ahora Tribunal Departamental de
Justicia- de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 819
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

La accionante, por memorial presentado el 11 de marzo de 2009, cursante de fs. 51 a 56 vta.,


manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Ante el Juzgado Noveno de Instrucción en lo Civil del Distrito Judicial de La Paz, se tramitó una
demanda preliminar de reconocimiento de firmas y rubricas, habiéndose dictado la Resolución
32/2002 de 10 de enero, dándose por reconocidas su firma y rubrica, posteriormente el 22 de
junio del mismo año, se formalizó en su contra juicio civil ejecutivo, cuya base y fundamento
consiste en un cheque del Banco Unión 00095, girado el 29 de febrero de 2000, por la suma de
$us. 4.500 (cuatro mil quinientos dólares estadunidenses); el que al ser un documento mercantil,
como lo señala el art. 487 inc. 3) del Código de Procedimiento Civil (CPC), constituye un título
ejecutivo, respecto a éstos el art. 607. 1) y 616 del Código de Comercio (Ccom), dispone que se
debe presentar el cheque al Banco dentro de los 30 días, de lo contrario prescribiría a los seis
meses la acción ejecutiva, citando el art. 618 del Ccom.

Refiere que el informe 196/2008, emitido por el Banco Unión, establece que el cheque señalado,
fue rechazado en 11 de febrero del 2000, y "...a partir de esa fecha la tenedora ahora ejecutante
en ese juicio (Sra. Rivero), TENIA SEIS MESES CALENDARIO, para presentar su demanda
ejecutiva, que CADUCÓ El 20 DE AGOSTO DE 2000 (sic.)". Por otra parte, la demanda
preliminar recién fue presentada al juzgado el 13 de noviembre de 2001, y peor aún la demanda
ejecutiva data del 22 de julio de 2002, es decir, fue presentada después de dos años de rechazado
el cheque, demanda ejecutiva que se encontraría en ejecución y en este estadio procesal.

Señala además, que con los fundamentos vertidos habría opuesto excepción de prescripción, la
misma que fue resuelta por el Juez Noveno de Instrucción en lo Civil, mediante Resolución
437/2008 de 14 de junio, que declaró probada la misma, disponiendo prescrita la acción
ejecutiva, con el fundamento del art. 1497 del Código Civil (CC).

Manifiesta que la parte contraria en el proceso ejecutivo apeló la Resolución antes mencionada,
habiéndose radicado la causa ante el Juzgado Tercero de Partido en lo Civil y Comercial, a cargo
de la Jueza ahora demandada, instancia que dictó - en su concepto - la agraviante Resolución
515/08 de 22 de diciembre de 2008, revocando el Auto Definitivo 437/2008 de 14 de julio, por
ende declarando improbada la excepción de prescripción que interpuso, la misma que es objeto
de la presente acción de amparo constitucional, por la cual se pretende se verifique si en la labor
interpretativa la Jueza que dictó el mencionado Auto de Vista no quebrantó los principios
constitucionales como son la jerarquía normativa, legalidad, seguridad jurídica y los derechos a
la propiedad privada, a la defensa y a la justicia.

Argumenta sobre la violación al principio fundamental de la jerarquía normativa, ya que dicho


Auto de Vista, tiene como fundamento lo preceptuado por los arts. 507 y 509 del CPC, citando
jurisprudencia donde se omite totalmente pronunciarse sobre lo preceptuado por el art. 1487 del
CC, que es la base sustantiva de los articulados precedentes, además que el contenido de los arts.
334, 337, 344 y 509 del CPC, en interpretación sistemática integral reconocen la admisibilidad
de las excepciones en ejecución de sentencia en juicio ejecutivo, aspecto absolutamente
desconocido por la Jueza demandada, que no ha realizado una interpretación correcta de la
norma sustantiva, constitucional y adjetiva, sobreponiendo de manera unilateral una norma de
inferior rango como el Código de Procedimiento Civil, a la norma superior como es el Código
Civil, vulnerando los principios de supremacía constitucional jerarquía normativa, citando al
efecto las SSCC "13/03 de 14 de febrero (RII), 60/03 de 3 de Julio (RDI), 48/06 de 5 de junio
(RDI) y 22/06 de 18 de Abril (RDI)."

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 820


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Por encontrarse el proceso ejecutivo en estado de remate que afecta directamente sus derechos a
la propiedad, a la defensa y al debido proceso reconocidos por los arts. 56, 119.II y 117.I de la
Constitución Política del Estado (CPE), puesto que al haberse sustentado el Auto de Vista de
manera unilateral en el Código adjetivo, se le habría privado asumir defensa.

I.1.2. Derechos y principios supuestamente vulnerados

La accionante manifiesta la vulneración de sus derechos a la propiedad, a la defensa y al debido


proceso, citando al efecto los arts. 56, 117.I y 119 de la CPE, además, de los principios de
supremacía constitucional y jerarquía normativa.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare "procedente" la acción, y se anule la Resolución 515/08, pronunciada por la


Jueza demandada, por quebrantamiento de principios constitucionales informadores del
ordenamiento jurídico, además de la reparación de daños, perjuicios y costas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 11 de mayo de 2011, según consta en el acta cursante de fs. 97
a 98 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La abogada de la accionante ratificó in extenso los términos de la acción de amparo


constitucional, presentando como elemento nuevo, cedulones consistentes en la Resolución
298/2009 de 22 de abril, donde consta que en forma posterior al rechazo in límine que se efectuó
por esa Sala, se aprobó el remate de la casa de su patrocinada por la suma de "31 346,3" (sic.)
(treinta y un mil trescientos cuarenta y seis), además aduce "se ha liquidado una deuda que ya
estaba prescrita y que fue revocada por la demandante en la suma de 6.339 enorme daño que
debe ser reparado por los causantes…" (sic).

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

La demandada María Consuelo Chacón Schmidt de Méndez, Jueza Tercera de Partido en lo


Civil y Comercial, mediante informe escrito de 9 de mayo de 2011, corriente de fs. 95 a 96 de
obrados, manifestó que: a) La accionante no cumplió con la previsión del art. 97.II de la Ley del
Tribunal Constitucional(LTC),por el que se debió consignar el nombre y domicilio de la parte
"recurrida", afirmando " por cuanto el nombre de la suscrita no es María Consuelo Chacón de
Schmidt, sino que el apellido materno es Schmidt y el apellido de casada es Méndez, de ello
manifiesta que no se interpuso el Recurso contra la autoridad debida…"(sic); b) Asimismo, sin
consentir el incumplimiento de requisitos en la admisión del "recurso" de amparo, manifestó que
el Auto de Vista dictado el 2008, en el proceso ejecutivo, se encuentra estrictamente adecuado a
las normas del Código de Procedimiento Civil, como son los arts. 507 inc. 7), 509.II, conforme
al art. 91 del mencionado procedimiento, igualmente tuvo presente el art. 1497 del CC, el que se
entendió en el sentido del art. 336 inc. 9) del CPC aplicable al proceso ordinario y no ejecutivo;
y, c) Finalmente "…no se considera la prescripción una verdadera causa de extinción de las
obligaciones, porque deja subsistente con cargo al deudor una obligación natural llamada deber
moral…" (sic.).

I.2.3. Intervención de la tercera interesada

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 821


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

La tercera interesada Adela Rivero España, no presentó ninguna fundamentación en forma


escrita ni concurrió a la audiencia pública, pese a su legal citación.

I.2.4. Resolución

La Sala Civil Primera de la Corte Superior de Justicia del Distrito Judicial de La Paz, constituida
en Tribunal de garantías, por Resolución 018/2011 de 11 de mayo, cursante de fs. 99 a 102 de
obrados, concedió el amparo constitucional interpuesto, anulando en su merito la Resolución
515/08 pronunciada por la Jueza Tercera de Partido en lo Civil y Comercial del mismo Distrito
Judicial, disponiendo se dicte un nuevo Auto de Vista, con el siguiente fundamento:

La demandada María Consuelo Chacón Schmidt de Méndez, al pronunciar el Auto de Vista


515/08 y revocar el Auto Definitivo 437/2008, declarando improbada la excepción de
prescripción interpuesta por Julia Marcela Sumi de Ayala, ha vulnerado derechos y garantías
constitucionales de la accionante como son el debido proceso, al no fundamentar adecuadamente
la Resolución impugnada, sin considerar también las disposiciones legales que rigen la materia
como son los arts. 618 del Ccom. y 1497 del CC, limitándose a señalar que en el proceso
ejecutivo no proceden las excepciones en ejecución de sentencia, conforme a los arts. 507 y 509
del CPC, citando partes pertinentes de las SSCC 1116/2006-R, 0299/2010-R y 1534/2003-R.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformo la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro del plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. En el proceso ejecutivo interpuesto por Adela Rivero España contra Julia Marcela Sumi de
Ayala, por el cobro de cheque de $us 4.500.-, el Juez Noveno de Instrucción en lo Civil del
Distrito Judicial de La Paz, declaró probada la excepción de prescripción mediante Auto
Definitivo 437/2008 de 14 de junio, que fue planteada en ejecución de sentencia (fs. 27 y vta.).

La citada Resolución se fundó en lo siguiente: El cheque objeto de cobro en el proceso ejecutivo


fue rechazado el 11 de febrero de 2000, fecha desde la cual la acreedora tenía la potestad de
iniciar el proceso; por cuanto el art. 618 del Ccom., señala que la acción ejecutiva prescribe a los
seis meses a contar desde que el endosario pague el cheque o desde la presentación en el banco.
Han transcurrido 1 año, 9 meses y 2 días, sin que el tenedor del cheque haya iniciado acción
alguna y a la presentación de la demanda ejecutiva han transcurrido 2 años, 4 meses y 11 días;
de acuerdo al art. 1497 del CC, la prescripción puede oponerse aún en ejecución de sentencia.

II.2. Contra esa Sentencia de primer grado, la demandante Adela Rivero España planteó
apelación, primordialmente porque de acuerdo a los arts. 507 y 509 del CPC, las excepciones
previas se deben presentar dentro los cinco días y las perentorias hasta antes de dictar sentencia,
por lo que resulta ilógico que el Juez resuelva una excepción después de dictada una sentencia
que se halla en ejecución (fs. 30 a 31 y vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 822


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Asimismo, la demandada ahora accionante respondió la apelación mencionada con los


siguientes argumentos; existe jerarquía normativa establecida por el art. 228 de la Constitución
Política del Estado abrogada (CPEabrg); la apelante no dice cual la prueba pre constituida, por la
cual la Resolución recurrida declaró probada la prescripción; el cheque objeto de cobro judicial,
de acuerdo al art. 487 inc. 3) del Ccom, es un título ejecutivo; se planteó la excepción de
prescripción en aplicación del art. 1497 del CC, que establece que puede oponerse hasta en
ejecución de sentencia, norma sustantiva que es de rango superior al procedimiento,
específicamente a los arts. 507 inc.6) y 509 del CPC, realizándose la aplicación errónea de la
norma adjetiva sobre la sustantiva; se debe aplicar al caso la norma especial que es el Código de
Comercio (fs. 33 a 34 vta.).

II.3. En apelación, el Auto Definitivo 437/2008, fue revocado por la Jueza Tercera de Partido en
lo Civil y Comercial, María Consuelo Chacón Schmidt de Méndez (hoy demandada), mediante
Auto de Vista 515/08, declarando improbada la excepción de prescripción, mencionando la
descripción de la Resolución apelada y la obligación de los jueces de alzada que señalan los arts.
15 de la Ley de Organización Judicial (LOJ) de 1993 y 236 del CPC, para señalar que la parte
ejecutada no consideró lo dispuesto por los arts. 507 y 509 del CPC., de cuyo contenido deduce
que en ejecución de sentencia no procede interponer excepción perentoria alguna (fs. 43 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante considera que se han vulnerado sus derechos a la propiedad, a la defensa, al


debido proceso así como los principios de supremacía constitucional y jerarquía normativa, por
cuanto la Resolución 437/2008, emitida por el Juez Noveno de Instrucción en lo Civil del
Distrito Judicial de La Paz, que declaró probada su excepción de prescripción, después fue
revocada en apelación por la Jueza Tercera de Partido en lo Civil y Comercial, mediante Auto de
Vista 515/08,que declaró improbada dicha excepción, señalando como único fundamento que en
ejecución de sentencia, no procede interponer excepción perentoria alguna, aspecto que de
acuerdo a su criterio, sería el resultado de una interpretación incompleta y equivocada que
realizó la Jueza demandada, donde se omitió una interpretación sistemática e integral, pues
únicamente se aplicó los arts. 507 y 509 del CPC, omitiendo la aplicación del art. 1497 del CC y
los arts. 334, 337, 344 del CPC, que interpretados de forma integral reconocen la admisibilidad
de las excepciones en ejecución de sentencia. En consecuencia, corresponde en revisión,
verificar si tales extremos son evidentes a fin de denegar o conceder la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es una acción tutelar de carácter extraordinario, cuya


finalidad es la protección de los derechos fundamentales de las personas, establecida en el art.
128 de la CPE, y procede: "…contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley".

A su vez, el art. 129 de la misma Norma Fundamental establece que: 'I. La Acción de Amparo
Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con
poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante
cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la
protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados. II. La
Acción de Amparo Constitucional podrá interponerse en el plazo máximo de seis meses,
computable a partir de la comisión de la vulneración alegada o de notificada la última decisión
administrativa o judicial".

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 823


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.2. Interpretación de la legalidad ordinaria

En la presente acción tutelar, conforme a los antecedentes que cursan en obrados y la pretensión
de la ahora accionante, es imperioso referirse a la interpretación de la legalidad ordinaria,
respecto a la cual la jurisdicción constitucional se ha pronunciado, señalando que:"Si bien la
interpretación de la legalidad ordinaria debe ser labor de la jurisdicción común, corresponde a
la justicia constitucional verificar si en esa labor interpretativa no se han quebrantado los
principios constitucionales informadores del ordenamiento jurídico, entre ellos, los de
legalidad, seguridad jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y debido
proceso; principios a los que se hallan vinculados todos los operadores jurídicos de la nación;
dado que compete a la jurisdicción constitucional otorgar la protección requerida, a través de
las acciones de tutela establecidas antes en los arts. 18 y 19 de la CPE abrg, ahora en los arts.
125 y 128 de la CPE, ante violaciones a los derechos y garantías constitucionales, ocasionadas
por una interpretación que tenga su origen en la jurisdicción ordinaria, que vulnere principios
y valores constitucionales. (SC 1846/2004 - R de 30 de noviembre).

En situaciones en las que se exige a la jurisdicción constitucional examinar la interpretación


realizada por la jurisdicción ordinaria, se debe tener presente que la labor interpretativa de las
normas legales ordinarias corresponde a los jueces y tribunales de la jurisdicción ordinaria,
pues dicha labor interpretativa debe ser desarrollada con resguardo del sistema de valores
supremos, así como de los principios fundamentales que constituyen la base del sistema
constitucional boliviano, así como respetando o resguardando los derechos fundamentales y
garantías constitucionales, por lo que corresponde a la jurisdicción constitucional verificar si
en esa labor interpretativa, la jurisdicción ordinaria no ha quebrantado los cánones referidos;
es decir, el sistema de valores supremos y principios fundamentales, o se ha vulnerado los
derechos y garantías constitucionales" (SC 2002/2010-R de 26 de octubre y reiterada en la SC
1846/2004-R de 30 de noviembre). Los razonamientos de las líneas jurisprudenciales citadas,
son adoptados, por cuanto no son contrarios al orden constitucional vigente.

III.2.1 Requisitos para la interpretación de la legalidad ordinaria

Para que la jurisdicción constitucional realice la interpretación de la legalidad ordinaria, ante una
supuesta lesión de derechos constitucionales en la interpretación efectuada por la jurisdicción
ordinaria, se asume el entendimiento contenido en las SSCC 0085/2006-R y 2045/2010-R, entre
otras, al ser imprescindible que quien la solicite cumpla con los requisitos de: "i) Expresar en
forma precisa los fundamentos jurídicos en los que sustenta su posición, fundamentos en los que
deberá exponer con claridad y precisión los principios o criterios interpretativos que no fueron
cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y
consiguiente aplicación de la norma interpretada; y, ii) Exponer qué principios fundamentales o
valores supremos no fueron tomados en cuenta o fueron desconocidos por el intérprete al
momento de desarrollar la labor interpretativa y asumir la decisión impugnada; pues resulta
insuficiente la mera relación de hechos o la sola enumeración de las normas legales
supuestamente infringidas, porque sólo en la medida en que el recurrente expresa adecuada y
suficientemente sus fundamentos jurídicos la jurisdicción constitucional podrá realizar la labor
de contrastación entre la interpretación legal realizada por la jurisdicción ordinaria y los
fundamentos que sustentan la interpretación y las conclusiones a las que arribó, con los
fundamentos y pretensiones expuestos por el recurrente, ahora accionante".

III.3. Análisis del caso concreto

De los antecedentes procesales se constata que la accionante denuncia que dentro del proceso
ejecutivo que se le siguió por cobro de cheque, una vez pronunciada la Sentencia 939/2002 de 1
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 824
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de octubre de 2002, que declaró probada la demanda, la misma se ejecutorió al no haber sido
apelada por las partes; circunstancia por la que en ejecución de fallos, planteó la excepción de
prescripción, que fue declarada probada por el Juez Noveno de Instrucción en lo Civil,
Resolución que en apelación fue resuelta por la Jueza Tercera de Partido en lo Civil y
Comercial, quien -según su criterio- realizó una interpretación parcial y equivocada, sólo en base
a los arts. 507 y 509 del CPC, en la emisión del Auto de Vista 515/08, que revocó el Auto
Definitivo apelado y declaró improbada la excepción de prescripción que le beneficiaba,
omitiendo una interpretación sistemática e integral del art. 1497 del CC.

Al respecto, cabe señalar, que conforme se ha referido precedentemente, para que la jurisdicción
constitucional realice la interpretación de la legalidad ordinaria, el accionante debe cumplir con
los requisitos señalados en el Fundamento Jurídico III.2.1 del presente fallo, los que en este caso
no han sido cumplidos, toda vez que la ahora accionante en el memorial de acción de amparo
constitucional, señala: "que el contenido de los arts. 334, 337, 344 y 509 del CPC, en
interpretación sistemática integral reconocen la admisibilidad de las excepciones en ejecución de
sentencia en juicio ejecutivo, aspecto absolutamente desconocido por la Juez Tercero de Partido
en lo Civil y Comercial, que no ha realizado una interpretación correcta de la norma sustantiva,
constitucional y adjetiva, sobreponiendo de manera unilateral una norma de inferior rango como
el Código de Procedimiento Civil, a la norma superior como es el Código Civil", sin expresar
adecuadamente ni precisar los fundamentos jurídicos por los cuales considera se lesionaron sus
derechos o garantías fundamentales, omitiendo exponer con claridad y precisión los principios o
criterios interpretativos que no fueron cumplidos o desconocidos por la Jueza de alzada o cuáles
fueron los principios fundamentales o valores supremos que no tomó el cuenta, limitándose a
citar las disposiciones legales que reconocen la admisibilidad de la excepciones en ejecución de
sentencia y que la autoridad jurisdiccional no realizó una interpretación correcta de la norma
sustantiva, constitucional y adjetiva, sobreponiendo de manera unilateral una norma de inferior
rango; omisiones que no hacen viable que se realice la interpretación de la legalidad ordinaria
por la jurisdicción constitucional, al no haberse cumplido -como se dijo- con los requisitos que
se exigen para proceder a ello.

En consecuencia, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones del art. 128 de
la CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al conceder la acción de amparo constitucional no
efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes procesales ni dio correcta aplicación al
citado precepto constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:

1° REVOCAR la Resolución 018/2011 de 11 de mayo, cursante de fs. 99 a 102, pronunciada


por la Sala Civil Primera de la Corte Superior de Justicia del Distrito Judicial ahora Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz; y en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada

2° En virtud a lo dispuesto por el art. 48.IV de la LTC, en mérito al tiempo transcurrido y por
economía procesal, se mantienen los efectos de la Resolución del Tribunal de garantías,
disponiendo que subsistan los actos procesales desarrollados como emergencia de la concesión
de la tutela.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 825


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0073/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20630-42-AAC
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 161/2009 de 23 de septiembre, dentro de la acción de amparo


constitucional, interpuesta por Teresa Yudy Hinojosa Duran en representación de Jean
Daher Jarjoui contra Teresa Lourdes Ardaya y Jacinto Morón Sánchez, Vocales de la Sala
Penal Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 19 de junio de 2009, cursante de fs. 165 a 166., la accionante por su
representado alega que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Existe una investigación penal seguida por el Servicio Nacional de Caminos (SNC) en
liquidación en su contra, en base a informes emitidos por la Contraloría General del Estado, los
cuales merecieron el recurso de impugnación al tenor del art. 43 inc. b) de la Ley de
Administración y Control Gubernamentales (L1178), razón por la cual, en mérito a dicho
recurso, dentro del proceso penal mencionado interpuso excepción de prejudicialidad ante el
Juez Décimo de Instrucción en lo Penal, con el argumento de la existencia de un "trámite" extra
penal en la Contraloría General de la Republica -ahora Contraloría General del Estado- y que la
resolución que emerja del mismo, determinará los elementos constitutivos de los tipos penales
que le imputaron, por lo que correspondería la paralización de la investigación. En ese sentido,
el Juez de la causa dispuso la suspensión de la acción penal hasta que el procedimiento
administrativo dicte la resolución respectiva; sin embargo, las autoridades hoy demandadas, en
razón a la apelación planteada por el representante del SNC en liquidación, revocó el fallo
apelado, disponiendo "la continuación de la acción penal sin analizar correctamente la
documentación" (sic), como también realizaron una errónea interpretación de la SC
0830/2007-R "al indicar que solo se presenta esta excepción de prejudicialidad cuando
existe otro proceso, en otros órganos jurisdiccionales como ser civil, laboral" (sic).

I.1.2. Derechos, garantías y principio supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 826


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

La accionante alega la vulneración a los derechos y garantías de su representado a la defensa, al


debido proceso, a la igualdad y al principio de seguridad jurídica, citando al efecto únicamente
los arts. 115. I, 117.I y II y 119.I, de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

La accionante por su representado solicita se "apruebe" la acción de amparo constitucional;


determinándose la reposición del Auto motivado cursante de fs. 64 a 65, emitido por el Juez
Décimo de Instrucción en lo Penal y como medida cautelar la suspensión de la acción penal.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 23 de septiembre de 2009, con la presencia de la parte


accionante y el representante legal del SNC en liquidación, en calidad de tercero interesado;
ausentes las autoridades demandadas, conforme consta en el acta cursante de fs. 162 a 165, se
produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La parte accionante, ratificó íntegramente los términos de su acción y ampliándola señaló: a)


Teniendo en cuenta el carácter vinculante de la jurisprudencia sentada por el Tribunal
Constitucional, requirió la aplicación de la SC 021/2007 de 10 de mayo, la cual establece que
todo informe de auditoría debe ser notificado a las partes interesadas para que dentro de los diez
días que prevé los art. 39 y 40 del Decreto Supremo (DS) 23215 de 22 de julio de 1992, pueda
realizar los descargos correspondientes; y, b) Solicitó la revocatoria del Auto de Vista emitido
por las autoridades demandadas, puesto que vulnera el principio de inocencia de su
representado, pues en uno de los considerandos de dicho fallo se establece que el interesado
puede descargarse de la auditoria, en un proceso oral, público y contradictorio.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Las autoridades demandadas, no asistieron a la audiencia pública ni presentaron informe escrito,


pese a su legal notificación.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El representante legal del SNC en liquidación en calidad tercero interesado indicó que: 1) El
imputado es investigado por la presunta comisión de los delitos de falsedad material, falsedad
ideológica y uso de instrumento falsificado, por haber participado en un proceso de contratación
como representante de empresas supuestamente ficticias, solo con el propósito de adjudicarse
dicho contrato; en este sentido, ningún proceso de aclaración en la Contraloría General del
Estado, podría determinar la falsedad de los documentos cuestionados que deben ser
determinados por la justicia ordinaria en sede penal y no en la administrativa; 2) La acción de
amparo constitucional, no demuestra sustento legal válido ni objetivo de cualquier acto u
omisión indebida ilegal de parte de los "recurridos" que haya generado lesión a derechos
fundamentales, extremo que debió ser observado con el rechazo in limine; y, 3) El accionante
tiene la oportunidad de presentar sus descargos en sede penal vía actos de investigación dentro
del desarrollo de la etapa preparatoria y de esta manera buscar un acto conclusivo de
sobreseimiento.

I.2.4. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 827


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Mediante Resolución 161/2009, cursante de fs. 165 a 166, la Sala Civil Segunda, denegó la
acción de amparo constitucional en base al siguiente argumento: La Sala Penal Primera emitió el
Auto de Vista 44 de 20 de abril de 2009, debidamente fundamentado y conforme a ley, toda vez
que, el informe de la Contraloría General de la República se constituye en un simple indicio; sin
embargo, quien tiene que determinar si existe o no responsabilidad penal en cuanto a los delitos
que se le atribuyen al accionante, corresponde al órgano jurisdiccional penal.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose Resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público a denuncia del SNC en
liquidación, el Fiscal de Materia Anticorrupción, imputó formalmente a Jean Daher Jarjoui por
la presunta comisión de los delitos de falsedad material, falsedad ideológica y uso de
instrumento falsificado (fs. 80 a 81).

II.2. Mediante memorial presentado el 30 de octubre de 2007, Jean Daher Jarjoui, formuló
excepción de fs. 82 a 84); misma que fue resuelta por Auto 319/07 de 23 de noviembre de 2007,
a través del cual el Juez Décimo de Instrucción en lo Penal, admitió la referida excepción,
disponiendo la suspensión de la acción penal hasta que el "procedimiento extrapenal", dicte la
resolución respectiva (fs. 69 a 70).

II.3. Jaime Aguirre Arauz, en representación del SNC en liquidación, interpuso recurso de
apelación incidental contra el Auto 319/07 (fs. 105 a 107 vta.); por Auto de Vista 44, dictado por
la Sala Penal Primera, se declaró admisible y procedente la apelación planteada y por
consiguiente se revocó el Auto 319/07 emitido por el Juez Décimo de Instrucción en lo Penal,
disponiendo la continuación de la acción penal iniciada contra Jean Daher Jarjoui (fs. 118 a
120).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

La accionante por su representado alega que las autoridades demandadas vulneraron sus
derechos a la defensa, al debido proceso, a la igualdad, a la presunción de inocencia y al
principio de seguridad jurídica, toda vez que, interpuso recurso de impugnación en sede
administrativa contra los informes emitidos por la Contraloría General del Estado y por ello,
planteo ante el Juez Décimo de Instrucción en lo Penal, excepción de prejudicialidad, quien
dispuso la suspensión de la acción penal hasta que el procedimiento administrativo dicte la
resolución respectiva; fallo que fue revocado por las autoridades hoy demandadas, previa
solicitud del Servicio Nacional de Caminos en liquidación, disponiendo la continuación de la
acción penal sin analizar correctamente la documentación presentada y bajo una errónea
interpretación de la SC 0830/2007-R. Corresponde analizar, si en el presente caso se debe
conceder o denegar la tutela solicitada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 828
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.1. Limites de la jurisdicción constitucional

El art. 196.I de la CPE, establece que: "El Tribunal Constitucional vela por la supremacía de la
Constitución, ejerce el control de constitucionalidad y precautela el respeto y vigencia de los
derechos y las garantías constitucionales", por la su parte la ley de desarrollo, Ley del Tribunal
Constitucional, en su art. 1.II señala que: "Son fines del Tribunal Constitucional ejercer el
control de constitucionalidad y garantizar la primacía de la Constitución, el respeto y vigencia de
los derechos y garantías fundamentales de las personas, así como la constitucionalidad de las
convenciones y tratados" (sic). Finalidad que no debe ser desnaturalizada o confundida, a través
de pretensiones que van contra sus atribuciones.

Por ello, si bien es cierto que la labor jurisdiccional es transversal, es decir en el desarrollo de
sus atribuciones aborda diversas temáticas desde la vertiente constitucional cuando se activa una
acción, recurso o consulta constitucional; no es menos evidente que también tiene ciertos
límites, siendo uno de ellos la interpretación de las leyes al caso concreto dentro de los procesos
ordinarios, y otro, la valoración de la prueba en torno a la definición de la situación jurídica de
fondo en el proceso ordinario en cuestión.

III.2.La interpretación de la ley en un caso concreto le corresponde a la jurisdicción


ordinaria, salvo ciertas excepciones que importen lesión a derechos fundamentales

Al respecto, el Tribunal Constitucional, mediante la SC 0854/2010-R de 10 de agosto, la cual no


contradice el ordenamiento constitucional vigente, dejó establecido que: "…la Constitución
reconoce diversas jurisdicciones en las cuales las autoridades con plenitud de jurisdicción y
competencia interpretan y aplican las normas al caso concreto, la jurisdicción constitucional no
puede desconocer esa atribución y generar un desequilibrio entre jurisdicciones; aspecto que
no ha sido comprendido y que en muchas ocasiones ha generado confusión en el foro jurídico.
No obstante, teniendo en cuenta que las autoridades judiciales o administrativas son seres
humanos; y por tanto, falibles se consideran aquellos casos de interpretaciones evidentemente
lesivas a derechos fundamentales, arbitrarias o irracionales, situación en la cual, de manera
excepcional puede el Tribunal Constitucional verificar: '…si en esa labor interpretativa no se
han quebrantado los principios constitucionales informadores del ordenamiento jurídico, entre
ellos, los de legalidad, seguridad jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y
debido proceso; principios a los que se hallan vinculados todos los operadores jurídicos de la
nación…' ".

En ese entendido, la SC 0090/2010-R de 4 de mayo, la cual no es contraria al ordenamiento


constitucional actual, dejó claramente establecido que: "…para que el Tribunal cumpla su labor
de revisión de la interpretación de la legalidad ordinaria, la SC 0718/2005-R de 28 de junio,
estableció que, es necesario que: 'la parte procesal, que se considera agraviada con los
resultados de la interpretación porque lesionan sus derechos fundamentales, exprese de manera
adecuada y precisa los fundamentos jurídicos que sustenten su posición, fundamentos en los que
deberá exponer con claridad y precisión los principios o criterios interpretativos que no fueron
cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y
consiguiente aplicación de la norma interpretada; asimismo, exponer qué principios
fundamentales o valores supremos no fueron tomados en cuenta o fueron desconocidos por el
intérprete al momento de desarrollar la labor interpretativa y asumir la decisión impugnada;
pues resulta insuficiente la mera relación de hechos o la sola enumeración de las normas
legales supuestamente infringidas; porque sólo en la medida en que el recurrente expresa
adecuada y suficientemente sus fundamentos jurídicos la jurisdicción constitucional podrá
realizar la labor de contrastación entre la interpretación legal realizada por la jurisdicción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 829


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

ordinaria y los fundamentos que sustentan la interpretación y las conclusiones a las que arribó,
con los fundamentos y pretensiones expuestos por el recurrente del amparo constitucional'.

Conforme a ello, y atendiendo a que la jurisdicción constitucional sólo puede analizar la


interpretación efectuada por los jueces y tribunales ordinarios cuando se impugna tal labor
como irrazonable, es necesario que el recurrente, en su recurso, a tiempo de cuestionar la
interpretación de la legalidad ordinaria: 1) Explique porqué la labor interpretativa impugnada
resulta insuficientemente motivada, arbitraria, incongruente, absurda o ilógica o con error
evidente, identificando, en su caso, las reglas de interpretación que fueron omitidas por el
órgano judicial o administrativo, y 2) Precise los derechos o garantías constitucionales que
fueron lesionados por el intérprete, estableciendo el nexo de causalidad entre éstos y la
interpretación impugnada; dado que sólo de esta manera la problemática planteada por el
recurrente, tendrá relevancia constitucional" (el subrayado nos corresponde).

III.3.La valoración de la prueba le corresponde a la jurisdicción ordinaria, salvo


excepciones y requisitos que necesariamente deben justificarse y fundamentarse

Sobre este punto, la precedentemente citada SC 0854/2010-R de 10 de agosto, señaló que:


"…dada la finalidad de las acciones tutelares, que esencialmente son protectoras de derechos
fundamentales y que por tanto no son una instancia casacional o alternativa de las vías
ordinarias"; por ello, recordó que: "…este Tribunal a través de las diversas acciones tutelares
no puede realizar una nueva valoración de la prueba sobre la problemática de fondo que
motivó la decisión judicial o administrativa impugnada, pues ello seria invadir otras
jurisdicciones desnaturalizando la esencia de esta acción tutelar por cuanto la valoración de
la prueba es una facultad privativa de dichas instancias ordinarias; esa es la regla y la línea
jurisprudencial adoptada" (las negrillas son nuestras).

Sin embargo, excepcionalmente este Tribunal puede revisar dicha labor, claro está, sin que ello
signifique sustituir la función exclusiva y privativa del órgano jurisdiccional o administrativo,
cuando: "…a) Exista apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad previsibles
para decidir (…) o b) Cuando se haya adoptado una conducta omisiva expresada, entre otras,
en no recibir, producir o compulsar cierta prueba inherente al caso y, su lógica consecuencia
sea la lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales…" (SC 1758/2010-R de 25
de octubre).

III.4. Análisis del caso concreto

De la revisión de la acción de amparo constitucional que nos ocupa y su petitorio, se tiene que la
accionante por su representado pretende: i) La interpretación de la SC 0830/2007-R de 10 de
diciembre, toda vez que dentro de la excepción de prejudicialidad interpuesta por su parte,
sostiene que la citada Resolución no fue aplicada de manera correcta por las autoridades
demandadas al emitir el Auto de Vista 44, por el cual revocaron el Auto 319/07 emitido por el
Juez Décimo de Instrucción en lo Penal, disponiendo la continuación de la acción penal iniciada
en su contra, solicitando la "revocatoria" del mismo; y, ii) Se analice la documentación
presentada con dicha excepción, puesto que las autoridades demandadas no lo hicieron
correctamente.

Respecto a la errónea interpretación alegada

De la jurisprudencia citada en el Fundamento Jurídico III.2 de ésta Sentencia, se tiene que el


Tribunal Constitucional dejó claramente establecido en su amplia, reiterada y solida
jurisprudencia que la interpretación de la legalidad ordinaria es una facultad privativa de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 830
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

jurisdicción ordinaria, pudiendo la jurisdicción constitucional excepcionalmente revisarla


solamente cuando se advierta que se hayan lesionado derechos fundamentales, para lo que el
accionante a tiempo de presentar una acción de amparo constitucional cuestionando la
interpretación de la legalidad ordinaria, debe cumplir con los requisitos ya sintetizados en el
mencionado fundamento jurídico, línea jurisprudencial a partir de la cual se tiene que la
interpretación de la legalidad ordinaria únicamente puede darse respecto a una norma, por
lo que la pretensión de la parte accionante mediante esta acción constitucional en el sentido de
que éste Tribunal realice dicha interpretación respecto a la SC 0830/2007-R de 10 de diciembre,
queda apartada de la misma, toda vez que a través de una acción de amparo constitucional
no se puede realizar la interpretación de un fallo constitucional, puesto que de ninguna
manera puede constituirse en una instancia revisora de la aplicación e interpretación de
otros fallos constitucionales, ya que de ser así se desnaturalizaría la esencia misma de la acción
de amparo constitucional.

Respecto al incorrecto análisis de la documentación presentada denunciado

Ahora bien, según informan los datos del proceso, se tiene que las autoridades demandadas,
revocaron el Auto que suspendió la acción penal, pero según la accionante, "sin analizar
correctamente la documentación" (sic) presentada como prueba adjunta a la excepción de
prejudicialidad interpuesta; en este sentido, se tiene que la pretensión directa de la accionante
es la revisión de las atribuciones de la vía ordinaria ligada al análisis de la valoración de la
prueba dilucidada en la tramitación de la citada excepción, por ello es que precisamente
pretende retrotraer el proceso judicial de donde emerge la presente acción tutelar; cometido que
este Tribunal no puede realizar, tal cual se tiene mencionado en el Fundamento Jurídico III.3 de
esta Resolución, puesto que la valoración de la prueba le corresponde a las instancias ordinarias,
caso contrario se ocasionaría una disfunción procesal entre ambas jurisdicciones; sin embargo,
efectivamente la jurisdicción constitucional puede intervenir en la revisión de dicho análisis
solamente cuando se cumplan con los presupuestos citados en la jurisprudencia señalada en el
Fundamento Jurídico referido; empero, tampoco ha cumplido con los mismos, dado que no ha
fundamentado ni acreditado la omisión valorativa de la indicada prueba, ni irrazonabilidad en
dicha labor. Situación que ratifica la imposibilidad de compulsar la prueba referida en la acción
tutelar.

En consecuencia, por lo explicado, no es posible considerar la problemática planteada, dado que


la ausencia de requisitos procesales atribuibles al propio accionante no puede ser suplida por
este Tribunal, y por ende, corresponde denegar la tutela solicitada con la respectiva aclaración.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la tutela, aunque con otros fundamentos,


ha evaluado en forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 161/2009 de 23 de septiembre, cursante de fs. 165 a 166,
pronunciada por la Sala Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental- de Santa Cruz; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, con la
aclaración de que no se ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 831


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0074/2012


Sucre, 12 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Macario Lahor Cortez Chávez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20673-42-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 45/2011 de 7 de septiembre, cursante de fs. 496 a 497, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Judith Flora Arana Flores
contra José Villalba Choque, Director General de la Escuela de Formación de Maestros
"Simón Bolívar"; Rodolfo Benavides Choque y Néstor Benito Huanca, Miembros del
Tribunal Disciplinario del Instituto Normal Superior "Simón Bolívar".

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 1 de octubre de 2009, cursante de fs. 134 a 138 vta., y escrito
de aclaración de 5 de agosto de 2011 (fs. 164 a 165), la accionante expresa los siguientes
fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por méritos propios y cumpliendo con todas las exigencias legales, asumió funciones como
Docente en la Carrera de Artes Plásticas del Instituto Normal Superior "Simón Bolívar";
empero, el 7 de octubre de 2008 apareció en dependencias del Coordinador del Área de Ciencias
Artísticas Musicales y Deportivas, una carta anónima -de denuncia en su contra- a la que se
adhirieron cuatro hojas -de firmas- que circularon para control de asistencia y no para presentar
ninguna solicitud de retiro con relación a ella; sin embargo, se remitió ante el Tribunal
Disciplinario de la entidad aludida que el 14 de noviembre de la misma gestión dictó el Auto
Inicial de Proceso Disciplinario, dentro del cual prestó su declaración informativa aclarando
todos los extremos atribuidos.

El 23 de diciembre de 2008 y el 19 de enero de 2009, exhibió todos los descargos testificales y


documentales, actuación para la que no están establecidos términos límites en el Reglamento de
Procesos a Docentes y Administrativos ni en el de Permanencia de Estudiantes, habiendo la
secretaria recepcionado los mismos; empero, además de no obtener respuesta alguna, a pesar de
sus reiteradas insistencias, se enteró que el 29 de diciembre de 2008 se habría dictado el Auto
Final de Proceso Disciplinario, con el que se notificó el 27 de enero de 2009; a cuya
consecuencia presentó, el 2 de febrero del citado año, recurso de apelación impugnándolo,
ofreciendo prueba testifical y documental no producida ni considerada en primera instancia,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 832
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

resaltando que según la última parte del art. 6 del Reglamento de Procesos a Docentes y
Administrativos, correspondía su sobreseimiento al no haberse dictado el Auto Final dentro de
los veinte días hábiles; cuestionando, de igual manera, la falta de decretos sobre la presentación
de pruebas de descargo y el hecho de no haberlos tomado en cuenta.

El 3 de abril de 2009, pidió se dicte resolución adjuntando mayor prueba de descargo; empero,
extrañamente la Resolución -de segunda instancia- emitida por el Concejo Directivo del Instituto
Normal Superior "Simón Bolívar", se dictó el 12 de enero de 2009, incluso un mes antes a la
presentación de la apelación -2 de febrero-; a cuya consecuencia, presentó recurso de
explicación el 6 de abril del citado año, documento que hasta la fecha de presentación de esta
acción de amparo constitucional, no tiene respuesta pese a sus insistencias verbales y escritas.
Sin resolver la explicación, ni haberse dispuesto su sobreseimiento el 6 de abril de 2009 se
dispuso la ejecución del Auto Final emitiendo Memorando de suspensión de actividades
laborales sin goce de haberes en su contra, el mismo que devolvió a través de nota de 7 del
citado mes y año, y que a la fecha no tiene respuesta ni fue dejado sin efecto, empero ante varias
violaciones y amenazas, gracias a sus protestas e insistencias verbales y escritas es que el propio
Director General de la Institución le convocó a su despacho, proponiéndole una solución
alternativa con la finalidad de no presentar ningún recurso de amparo, ofreciéndole dejar sin
efecto la sanción si aceptaba los hechos, propuesta que no tuvo una contraoferta de su parte por
cuanto no reconoce los hechos, encontrándose a la fecha con la amenaza latente de la ejecución
de su suspensión.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante alega la vulneración de sus derechos al debido proceso, a la defensa, a la


presunción de inocencia, "prerrogativa de presentar pruebas dentro del proceso" (sic), "sanción
previa ejecutoriada" (sic), al trabajo y a la "seguridad jurídica", citando al efecto los arts. 14, 46,
109, 116, 117, 119, 120, 128 y 129 de la Constitución Política del Estado (CPE); 1, 7, "10, 1"
(sic), 20, y 23 de la Declaración Universal sobre Derechos Humanos; y, 1, 8, 16, y 24 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, ordenándose la nulidad de las actuaciones "al haber sido dictada la
resolución de auto final fuera de término…habiendo sido dictada la resolución de auto de
vista…antes de la presentación de la apelación" (sic); y, dejándose sin efecto el Memorando de
suspensión de actividades laborales, más la imposición de costas procesales y honorarios
profesionales.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 7 de septiembre de 2011, conforme consta en el acta cursante a


fs. 494 a 495 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Ante la ausencia de la accionante en audiencia de amparo constitucional y la falta de poder legal


a nombre de su abogado, el Tribunal de garantías no le concedió la palabra.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 833


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

José Antonio Villalba, en audiencia afirmó que recién asumió el cargo de Director General de la
Escuela de Formación de Maestros "Simón Bolívar", el 1 de septiembre de 2009; en
consecuencia, tiene conocimiento superficial de los hechos relatados en la acción de amparo
constitucional, razón por la cual cedió la palabra al Asesor Jurídico de dicha Institución, quien
alegó: a) La agraviada pudo haber pedido la revisión de la Resolución de apelación ante el
Ministerio de Educación, al no haberlo hecho no agotó la vía administrativa; b) No fue
sancionada, tampoco se ejecutó el fallo del Tribunal Disciplinario, omisión que impide
compulsar la problemática planteada; c) Existe falta de legitimación pasiva dado que si bien el
Tribunal Disciplinario, conformado en aquel entonces, solamente tenia vigencia por un año,
actualmente el Tribunal ya no está conformado por Rodolfo Benavides sino por Néstor Benito
Huanca y por María Elena Martínez, situación que conforme establece la SC "711/2005" para
que sea viable la acción tutelar, todos los miembros que asumieron la decisión tendrían que
figurar como demandados, resultando que el Auto Final, como el Fallo Inicial del proceso
disciplinario están firmando por tres autoridades y lamentablemente el amparo constitucional
sólo se dirigió contra dos autoridades; d) Tampoco se cumplió con los establecido en la SC
"1351", que establece quienes son terceros interesados, en el caso presente tal calidad
corresponde a los estudiantes de la Carrera de Artes Plásticas, quienes denunciaron a la actual
actora, razón por la cual debe declararse la improcedencia de la demanda tutelar; e) Rechaza los
argumentos de la acción de amparo, dado que mediante Resolución 01/2008 de 14 de
noviembre, a causa de denuncias presentadas por los estudiantes de la Carrera de Artes Plásticas
y por instrucción de las autoridades del Instituto Superior "Simón Bolívar", se instauró el
proceso disciplinario contra la accionante, por faltas establecidas y tipificadas en el art. 5 del
Reglamento de Procesos a Docentes y Administrativos; f) El "19 de noviembre" se notificó a la
procesada con el Auto Inicial de Proceso; el 28 de noviembre de 2008, prestó su declaración
informativa, notificándole en la misma audiencia con el Auto de Apertura del término de
pruebas de veinte días hábiles, transcurrido el cual se cerró dicha etapa el 26 de diciembre de
2008; g) Mediante Resolución 02/2008 de 29 de diciembre, al existir suficientes indicios de
prueba de responsabilidad contra la procesada, el Tribunal decidió sancionarla en aplicación del
art. 8 inc. c) del citado Reglamento, suspendiéndola temporalmente de sus funciones durante
quince días, sin goce de haber; h) El 2 de febrero de 2009, dentro del término de ley, la
accionante interpuso recurso de apelación contra la Resolución "02/2009" de 29 de diciembre de
2008, remitida al Directorio del Instituto Normal Superior "Simón Bolívar", instancia en la que
la accionante no presentó sus pruebas en su oportunidad; i) Las autoridades demandadas no
tuvieron receso, sino que continuaron con sus funciones atendiendo no solamente el caso de la
accionante, también otros procesos, por lo que en grado de apelación el Consejo Directivo
determinó confirmar el Auto recurrido y ordenar su ejecutoria, no siendo evidente la lesión de
derechos aseverado por la agraviada; j) Desde la declaración informativa hasta el Auto Final del
proceso, la procesada fue atendida por un profesional abogado, así como en la presentación de
pruebas de descargo; por ende, no existe ninguna violación de derecho ni fundamento legal para
interponer la acción de amparo constitucional.

Rodolfo Benavides, en su calidad de ex Presidente del Tribunal Disciplinario, afirmó que el


Tribunal se sujetó única y exclusivamente a la norma establecida en el momento de la
sustanciación del proceso; en consecuencia, pidió se declare "improcedente" el petitorio
realizado por la accionante.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Social y Administrativa Segunda de la Corte Superior del


Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de Justicia- de La Paz, constituida en Tribunal
de garantías, pronunció la Resolución 45/2011 de 7 de septiembre, cursante de fs. 496 a 497, por
la que denegó la tutela, de acuerdo a los siguientes argumentos: 1) El silencio administrativo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 834
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

opera ante la falta de pronunciamiento a los recursos interpuestos contra resoluciones finales, en
el presente caso la ausencia de pronunciamiento es una solicitud de explicación y enmienda,
determinando la jurisprudencia constitucional al respecto, SC 0962/2011-R de 22 de junio, lo
siguiente: "La pretensión de la parte, respecto al fondo de la resolución que dirima un derecho
o la imposición de una sanción, es susceptible de impugnarse a través del recurso de apelación
y consiguientes medios de impugnaciones previstos en la ley; no así, con una solicitud de
explicación, complementación y enmienda, como se tiene dicho su repercusión es totalmente
limitada en relación a la decisión de fondo, al extremo que si se la niega, no tiene ninguna
incidencia en la resolución manteniéndose incólume, no se incluye lo reclamado, no forma
parte de lo resuelto. Es mas aún, de incluirse o modificarse los datos invocados, no alteran la
trascendencia de la decisión; por ello el juez o tribunal la resuelve sin sustanciación"; 2) Por lo
expresado, concluye que en el caso de análisis no existe la concurrencia del silencio
administrativo, como señala el AC 77/2011-RCA de 28 de febrero, por cuanto ya existe el
pronunciamiento de fondo por parte del Consejo Directivo del Instituto Normal Superior "Simón
Bolívar", quienes mediante Resolución 001/2009 de 12 de enero, confirmaron en todas sus
partes la Resolución 02/2008, rechazando la apelación formulada, a cuyo efecto el fondo se
encuentra resuelto y simplemente pendiente la respuesta a la solicitud de explicación, la cual de
ninguna forma alteraría el fondo de los resuelto; 3) Siendo que en la acción de amparo
constitucional se denunció la vulneración al debido proceso, derecho a la defensa, derecho a la
presunción de inocencia, a la "seguridad jurídica", y no así al derecho a la petición, el Tribunal
advierte que ninguno de estos derechos fueron vulnerados por las autoridades de la referida
Institución; y, 4) Concluye afirmando que la protección que brinda la acción tutelar "no se activa
cuando los efectos de la resolución o acto impugnado hubieren sido correctamente reclamados"
(sic), en el caso analizado se denunció la falta de respuesta a la solicitud de explicación, el
pronunciamiento del Auto de Vista antes que se presente el recurso de apelación y otros
aspectos, sin considerar en lo mínimo que la acción de amparo constitucional, no puede ser
utilizada como mecanismo alternativo o sustitutivo de protección, dado que ello desnaturalizaría
su esencia.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de la normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de la acciones tutelares ingresadas a los Tribunal de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presenta causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan
seguidamente:

II.1. Por Auto Inicial de Proceso Disciplinario 001/2008 de 14 de noviembre, Rodolfo


Benavides Choque, Néstor Benito Huanca y María Elena Martínez Pardo, Presidente, Fiscal
Promotor y Secretaria Actuaria del Tribunal Disciplinario del Instituto Normal Superior "Simón
Bolívar", respectivamente, resolvieron instaurar proceso disciplinario contra Judith Flora Arana
Flores, Docente de la Carrera de Artes Plásticas de la citada Entidad, por faltas establecidas en el
art. 5 del Reglamento de Procesos a Docentes y Administrativos (fs. 15 y vta.), a cuya
consecuencia, el 26 de noviembre del mismo año, se citó y emplazó a la procesada a objeto de
prestar su declaración informativa el "viernes a horas 9:30 del día…de noviembre de dos mil
ocho" (sic) (fs. 14), constando su celebración el 28 de noviembre de la referida gestión (fs. 221 a
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 835
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

223), así como un Auto de la misma fecha por la que el Fiscal Promotor declaró abierto el
término probatorio de veinte días hábiles a contar desde su pronunciamiento (fs. 220).

II.2. Por Auto de "26" de diciembre de 2008 -fecha sobrescrita- el Presidente y Fiscal Promotor
del Tribunal Disciplinario, declararon el cierre del término de pruebas (fs. 176).

II.3. Por Resolución "02/2009" de 29 de diciembre de 2008, el Tribunal Disciplinario resolvió


aplicar la sanción a Judith Flora Arana Flores de suspensión temporal de funciones por el lapso
de quince días, sin goce de haber, por actos de comisión y omisión en el ejercicio de sus
funciones y faltas de gravedad y de extrema gravedad de acuerdo al Reglamento de Procesos a
Docentes y Administrativos (fs. 89 a 90), actuación notificada a la agraviada el 27 de enero de
2009 (fs. 91), quien el 2 de febrero de la citada gestión planteó recurso de apelación,
presentando más prueba testifical y ratificación de prueba documental, ante los Miembros del
Directorio del Instituto Normal Superior "Simón Bolívar", (fs. 92 a 104), pidiendo a la misma
instancia, por memorial de 3 de abril del mismo año, dicte resolución pronunciándose sobre la
impugnación (fs. 105).

II.4. Mediante Resolución 001/2009 de 12 de enero, el Concejo Directivo del Instituto Normal
Superior "Simón Bolívar", conformado por Walter Amézaga Antequera, Ana María Irusta
Vásquez y Jesús Flores Condarco, Director Administrativo Financiero, Directora Académica y
Director General, respectivamente, en aplicación del art. 8 del Reglamento de Procesos a
Docentes y Administrativos, confirmó en todas sus partes la Resolución "02/2008 de fecha 29 de
diciembre de 2008" (sic) -haciendo referencia al Auto Final y sancionatorio descrito en el punto
anterior-, rechazando la apelación formulada, ordenando el cumplimiento de la sanción impuesta
por el Tribunal Disciplinario a partir de su notificación (fs. 106 a 107 vta.).

II.5. Mediante Memorando DG 164/2009 de 6 de abril, el Consejo Directivo, dando


cumplimiento a la Resolución 001/2009 de 12 de enero, comunicó a la actual accionante que a
partir de dicha fecha quedaba suspendida de sus funciones temporalmente por el plazo de quince
días, sin goce de haber, de conformidad a la Resolución del Tribunal Disciplinario 02/2008 de
29 de diciembre (fs. 111), el mismo que la agraviada devolvió al Director General, mediante
nota de 7 de abril de 2009 alegando falta de resolución del recurso de explicación planteado
contra la Resolución 001/2009 (fs. 112).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, alega que: i) Los demandados, en su condición de componentes del Tribunal


Disciplinario, basándose en una nota sin firmas que pedía el retiro de sus funciones como
Docente de la Carrera de Artes Plásticas, decidieron iniciar proceso disciplinario en su contra, en
el que no consideraron la prueba testifical y documental que presentó el 23 de diciembre de
2008 y 19 de enero de 2009, pronunciando Auto Final de Proceso Disciplinario "02/2009" el 29
de diciembre de 2008, del que recién asumió conocimiento el 27 de enero de 2009; y, ii) El 2 de
febrero de la citada gestión planteó recurso de apelación contra el referido pronunciamiento,
exhibiendo prueba testifical y documental no producida ni considerada en primera instancia;
empero, extrañamente, mucho antes de la presentación de la impugnación, el Consejo Directivo,
mediante Resolución 001/2009 de 12 de enero, resolvió la apelación, sin haber considerado la
prueba aportada para el efecto, hechos que cuestionó a través de una solicitud de explicación,
que hasta la fecha de presentación de la acción de amparo constitucional, no fue absuelta,
actuaciones que considera quebrantaron sus derechos al debido proceso, a la defensa, a la
presunción de inocencia, "prerrogativa de presentar pruebas dentro del proceso" (sic), "sanción
previa ejecutoriada" (sic), al trabajo y a la "seguridad jurídica". En consecuencia, corresponde
dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 836
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

los derechos fundamentales o garantías constitucionales de la accionante, a fin de conceder o


denegar la tutela solicitada.

III.1. Legitimación pasiva de tribunales colegiados

En cuanto a los requisitos de forma y contenido de inexcusable cumplimiento para la


admisibilidad de la acción de amparo constitucional, el art. 97 de la Ley del Tribunal
Constitucional (LTC), dispone los siguientes: "I. Acreditar la personería del recurrente; II.
Nombre y domicilio de la parte recurrida o de su representante legal; III. Exponer con precisión
y claridad los hechos que le sirvan de fundamento; IV. Precisar los derechos o garantías que se
consideren restringidos, suprimidos o amenazados; V. Acompañar las pruebas en que se funda la
pretensión; y, VI. Fijar con precisión el amparo que se solicita para preservar o restablecer el
derecho o la garantía vulnerados o amenazados.", habiendo definido la jurisprudencia
constitucional que el incumplimiento de los numerales I, II y V de la norma citada, constituyen
defectos formales que podrán ser subsanados por el accionante en el plazo de cuarenta y ocho
horas de su notificación, sin recurso ulterior; y, los requisitos contemplados en los parágrafos
III, IV y VI de la norma en estudio, constituyen requisitos de contenido, cuya inobservancia da
lugar a su rechazo directo; es decir, sin opción a subsanación (SSCC 0868/2000-R, 1130/2002-R
y 1365/2005, entre otras).

De acuerdo al entendimiento expuesto, cuando el tribunal o juez de garantías observe la ausencia


de cumplimiento del requisito contenido en el art. 97.II de la LTC, referente a la legitimación
pasiva, tiene la obligación de otorgar cuarenta y ocho horas al accionante para su
correspondiente corrección, y sólo en caso de no corregirse dicho defecto procesal dispondrá su
rechazo.

Sobre este requisito de forma; es decir, la coincidencia que debe existir entre la persona o
autoridad que presuntamente cometió la trasgresión de derechos fundamentales y garantías
constitucionales y aquella contra quien se dirige la acción, la jurisprudencia constitucional
definió diferentes situaciones que deben ser observadas por los agraviados con la finalidad de
identificarse plenamente a la persona o autoridad llamada a responder por las violaciones a
derechos y garantías; y, su correspondiente reparación, asumiendo en cuanto a la legitimación
pasiva de tribunales u órganos colegiados, la siguiente línea: "…para que sea viable el recurso
de amparo, cuando es planteado contra decisiones judiciales o administrativas pronunciadas
por tribunales y órganos colegiados públicos o particulares, sea como emergencia de procesos,
o de cualesquier tipo de decisiones o actos, es de inexcusable cumplimiento que esta acción
tutelar esté dirigida contra todos los miembros que asumieron dichas decisiones y, por lo
mismo, se constituyan en agraviantes de los supuestos actos lesivos denunciados…" (SC
0711/2005-R de 28 de junio, entendimiento acorde al ordenamiento constitucional vigente,
asumido y reiterado por las SSCC 0829/2010-R, 0937/2010-R, 1921/2010-R y 0229/2011-R);
sin embargo, este razonamiento general admite entre una de sus excepciones el caso de los
tribunales u órganos colegiados conformados por numerosas autoridades o representantes,
situación que se presenta en los consejos universitarios, asambleas de sociedades cooperativas,
sociedades anónimas, sociedades de responsabilidad limitada, sindicatos, asociaciones, entre
otras, cuya citación a todos y cada uno de los intervinientes, resultaría difícil, si no imposible,
provocando un inoportuno acceso a la justicia (SSCC 0447/2010-R y 0509/2010-R).

III.2. Análisis del caso concreto

La accionante, Docente de la Carrera de Artes Plásticas del entonces Instituto Normal Superior
"Simón Bolívar", considera que durante la tramitación del proceso disciplinario iniciado en su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 837


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

contra, tanto el Tribunal Disciplinario, como primera instancia; y, el Consejo Directivo, como
instancia de apelación de dicha entidad, vulneraron sus derechos fundamentales.

Al respecto, se verifica en el memorial de demanda tutelar, interpuesto el 1 de octubre de 2009,


que la agraviada nombró como autoridades legitimadas pasivamente a José Villalba Choque,
Director General de la Escuela de Formación de Maestros "Simón Bolívar" -nombre actual del
antes Instituto Normal Superior "Simón Bolívar"-; y, a Rodolfo Benavides Choque y Néstor
Benito Huanca, como componentes del Tribunal Disciplinario de la referida Institución; sin
embargo, en los hechos que motivan la acción, Antecedentes I.1.1, la accionante cuestiona la
forma de emisión y el contenido del Auto de Inicio de Proceso Disciplinario y la Resolución
Final, pronunciadas por el Tribunal Disciplinario; así como la Resolución de segunda instancia
emitida por el Consejo Directivo.

Conforme consta en Conclusiones II.1 y II.3 de este Fallo, la Resolución de Inicio de Proceso
Disciplinario 001/2008 de 14 de noviembre y el Auto Final "02/2009" de 29 de diciembre de
2008 fueron suscritas por Rodolfo Benavides Choque, Néstor Benito Huanca y María Elena
Martínez Pardo, Presidente, Fiscal Promotor y Secretaria Actuaria, respectivamente, del
Tribunal Disciplinario; es decir, esa instancia administrativa interna se encontraba conformada
por tres miembros, conforme dispone el último párrafo del art. 7 del Reglamento de Procesos a
Docentes y Administrativos que la referida entidad aplica para el procesamiento interno, al
disponer que requiere como mínimo a tres de sus cinco componentes para tener quórum; sin
embargo, la accionante sólo demandó a dos de los integrantes, Rodolfo Benavides Choque y
Néstor Benito Huanca, siendo evidente que omitió demandar también a María Elena Martínez
Pardo, tercera componente de dicho ente colegiado.

Similar situación ocurrió en el caso del Consejo Directivo, el que conforme Conclusiones II.4.
de esta Sentencia, estaba conformado por Walter Amézaga Antequera, Ana María Irusta
Vásquez y Jesús Flores Condarco, Director Administrativo Financiero, Directora Académica y
Director General, correspondientemente, quienes como Tribunal de segunda instancia
pronunciaron la Resolución 001/2009, que también es considerada agraviante por la accionante;
empero, en la demanda tutelar sólo demandó contra José Villalba Choque, nuevo Director
General de la Escuela de Formación de Maestros "Simón Bolívar", sin tomar en cuenta a todos
los miembros del Consejo Directivo que asumieron la decisión de mantener la sanción impuesta
por el Tribunal Disciplinario.

De acuerdo a lo relacionado se concluye que la accionante no cumplió a cabalidad con el


requisito de forma dispuesto en el art. 97.II de la LTC y desarrollado por la jurisprudencia
expuesta en el Fundamento Jurídico III.1 de este fallo, cual es la de identificar plenamente a la
autoridad que presuntamente causó la lesión, dirigiendo la acción de defensa contra ella, para el
caso concreto los legitimados pasivamente para responder la demanda tutelar era la totalidad de
los miembros del Tribunal Disciplinario y Consejo Directivo de la Escuela de Formación de
Maestros, inobservancia que en grado de revisión da lugar a la denegatoria del resguardo
solicitado.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber denegado la tutela solicitada, aunque con


otros fundamentos, evaluó adecuadamente los datos del proceso y las normas aplicables al
mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud a


lo previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011, en revisión resuelve:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 838
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

APROBAR, la Resolución 45/2011 de 7 de septiembre, cursante de fs. 496 a 497, pronunciada


por la Sala Social y Administrativa Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora
Tribunal Departamental de Justicia- de La Paz; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada, de acuerdo a los Fundamentos Jurídicos expuestos; con la aclaración que no se
ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional

No interviene la Magistrada, Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco, por excusa declarada legal.

Fdo Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0078/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Macario Lahor Cortez Chávez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20566-42-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 203/2011 de 7 de junio, cursante a fs. 191 y 193, pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Sonia Sara Inchausti Torricos de
Paredes, Santiago Serapio Emanuel Paredes Inchausti, José Gabriel Paredes Inchausti,
Zoraida Isabel Paredes Inchausti por sí y en representación del menor A.A.; y, Enrique
Paredes Inchausti por sí, y en representación de la menor B.B. contra Eva Mendizábal
Barrenechea, Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial del Distrito Judicial -ahora
Tribunal Departamental de Justicia- de Chuquisaca.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 17 de septiembre de 2009, cursante de fs. 132 a 140, los
accionantes expresan los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Sara Inchausti Torricos de Paredes por sí y en representación de los demás accionantes, en su


condición de poseedores de buena fe, quietos y pacíficos que por más de dieciséis años vivieron
en el bien inmueble situado en calle Bolívar 385 de la ciudad de Sucre, departamento de
Chuquisaca, instauraron demanda civil de interdicto de obra nueva perjudicial y daño temido
contra otros ocupantes circunstanciales que no tenían su domicilio, mucho menos su vivienda,
en dicho inmueble, Juan Carlos Moscoso Barrero, Claudio Rodolfo Moscoso Barrero y María
Mercedes Núñez Pinto de Moscoso, dado que iniciaron una serie de trabajos en el referido
inmueble, destruyendo completamente el ambiente destinado al servicio higiénico ocupado por
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 839
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

ellos -los actuales actores- sin considerar que con esa actitud los pusieron en serios conflictos
respecto a sus necesidades fisiológicas, obligándolos a habilitar precariamente otro baño, de
donde devino la Sentencia que declaró improbada la demanda.

Contra la aludida Resolución, interpusieron recurso de apelación, que radicó en el Juzgado


Quinto de Partido en lo Civil y Comercial, a cargo de la autoridad demandada, Eva Mendizábal
Barrenechea, quien confirmó la misma por Auto de Vista de 20 de abril de 2009, donde tenía la
obligación de fundamentar adecuadamente su determinación, aspecto que no cumplió por
cuanto: a) En relación a que la obra nueva perjudicial debía ser realizada en el inmueble del
vecino contiguo, encontrándose en su caso, dentro del inmueble de propiedad de los
demandados, el art. 1463.I del Código Civil (CC), hace referencia a que la denuncia de obra
nueva, pueda ser denunciada ante trabajos emprendidos por un vecino, mas eso no implica
necesariamente que la obra se deba realizar en un inmueble diferente, debido a que en un mismo
edificio pueden existir varios poseedores con los mismos derechos a una vida digna y tranquila;
b) La Jueza demandada asevera que "con referencia a sus derechos no es evidente que hayan
sido restringidos por los demandados propietarios, siendo que estos últimos le permitieron
habilitar un baño precario al ser persona ajena al inmueble" (sic); siendo sus derechos
conculcados de "manera flagrante" (sic), al restringirles el acceso a un servicio básico, además
que Sonia Sara Inchausti Torricos de Paredes, no es persona ajena; c) Finalmente, la autoridad
jurisdiccional demandada, afirma que "a los demandados propietarios les asiste realizar trabajos
de construcción o demolición por su condición de propietarios del inmueble" (sic), expresión
temeraria por cuanto a ningún propietario le asiste el derecho a realizar trabajos sobre ambientes
utilizados por un poseedor, habiendo correspondido que previamente hayan construido otro baño
para ser utilizado en su reemplazo, dado que los propietarios no tienen el poder absoluto de
disponer de un inmueble cuando existen terceras personas que habitan el mismo edificio.

Concluyen expresando que la Jueza cuestionada, al no haber fundamentado y motivado


adecuadamente la Resolución de 20 de abril de 2009, no sólo incurrió en una omisión que afecta
y conculca sus derechos fundamentales, sino que también incurrió en una causal de nulidad,
conforme establecen los "AASS 442 y 443, de 10 y 12 de septiembre de 2007 respectivamente"
(sic), habiéndose basado en conclusiones de la Resolución de primera instancia, por lo que se
trata de un Auto de Vista carente de fundamento, dictado con una falta de apreciación íntegra de
los elementos de prueba presentados en el proceso.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Los accionantes alegan la vulneración de sus derechos al debido proceso, a la defensa, a la


"seguridad jurídica", acceso a la justicia, a la dignidad, a gozar de una vivienda adecuada, a la
vida, a la salud, al agua, a los servicios básicos, a la niñez y juventud, acceso a la administración
de justicia pronta y oportuna, a la familia y a tener un desarrollo integral, citando al efecto los
arts. 15.I, 16.I, 18.I., 20.I, 22, 115 y 119.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con estos argumentos los accionantes solicitan se conceda la tutela, disponiendo: 1) Anular el
Auto de Vista de 20 de abril de 2009; 2) Se dicte nueva resolución conforme a derecho con la
debida fundamentación, en apego a las normas procesales y constitucionales; y, 3) El pago de
costas, daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de Garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 840


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Instalada y celebrada la audiencia pública el 7 de junio de 2011, conforme consta en el acta


cursante a fs. 187 a 190, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de los accionantes, se ratificó in extenso en el contenido de la demanda tutelar.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

La ahora autoridad demandada, presentó informe reiterando los fundamentos del Auto de Vista
impugnado, aclarando que: i) En su condición de ex Jueza Quinta de Partido en lo Civil y
Comercial, conoció la causa interdicta de obra nueva perjudicial en grado de apelación de
conformidad al art. 595 del Código de Procedimiento Civil (CPC), ii) La única actora o
demandante en el proceso de interdicto es Sonia Sara Inchausti Torricos de Paredes y no los
demás accionantes como consta en la redacción de la acción de amparo constitucional
interpuesta, iii) El Auto de Vista de 20 de abril de 2009, se basó en la prueba presentada a la
jueza a quo, conforme se evidencia en los datos del proceso; iv) La mejora introducida en el
inmueble por los propietarios, entonces demandados, se hizo en su fundo, no en un fundo ajeno;
v) El daño temido se da cuando un vecino contiguo hace trabajos afectando a su colindante y en
el caso de autos las construcciones se realizaron en predios propios de los demandados; y, vi) La
Resolución de segunda instancia que emitió tiene contenido de objetividad, sindéresis jurídica y
no se vulneró derecho alguno; los accionantes sólo quieren confundir al Tribunal de garantías.

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

El abogado de los terceros interesados, María Mercedes Núñez Pinto de Moscoso, Claudio
Rodolfo Moscoso Barrero y Juan Carlos Moscoso Barrero, en audiencia indicó: a) Los
demandados en el interdicto alegan que el Auto de Vista emitido por la Jueza demandada, no
lleva número de Auto; empero, está consignado con el "7/2009", b) Dicha Resolución,
contempla los arts. 214 y 226 del CPC; sin embargo, al momento de incoar la demanda
interdicta de obra nueva perjudicial, no se ajusta al art. 1463 del CC (CC), bajo el razonamiento
que no constituyen dos fundos distintos, c) Claudio Rodolfo Moscoso Barrero y Juan Carlos
Moscoso Barrero, en su calidad de propietarios del bien inmueble, procedieron a derrumbar el
baño, d) El poseedor es la persona que tiene el ánimus y el corpus y la demandante en el
interdicto solo tiene el corpus, e) Desde que los propietarios adquirieron el bien inmueble, no se
les dejó ingresar al mismo ni se les reconoció como legítimos propietarios, e incluso los actuales
accionantes trabaron la puerta de calle con un candado, razón por la cual interpusieron un
interdicto de recobrar la posesión y, f) La única persona que podía haber interpuesto la acción de
amparo constitucional, era Sonia Sara Inchausti Torricos de Paredes y no así los otros
coaccionantes porque la demanda de interdicto de obra nueva perjudicial fue planteada
solamente por ella.

I.2.4. Resolución

Por Resolución 203/2011 de 7 de junio, cursante de fs. 191 a 193 y vta., el Tribunal de garantías
denegó la tutela, y declaró no ha lugar a la nulidad del Auto de Vista de 20 de abril de 2009, con
los siguientes fundamentos: 1) Emergente del proceso de interdicto de obra nueva perjudicial o
daño temido, planteado por Sonia Sara Inchausti Torricos de Paredes, en contra de Juan Carlos
Moscoso Barrero, María Mercedes Núñez Pinto de Moscoso y Claudio Rodolfo Moscoso
Barrero, se dictó Sentencia en primera instancia que declaró improbada la demanda; 2) La actual
accionante Sonia Sara Inchausti, planteó recurso de apelación, que fue resuelto por la ex Jueza
Eva Mendizabal Barrenechea; sin embargo, los accionantes no demandaron en la acción tutelar a
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 841
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

la Jueza de Instrucción que tramitó y conoció la causa, por cuanto el Auto de Vista de 20 de
abril de 2009 es emergente de la primera instancia; y, 3) Los agraviados no llegaron a establecer
cuáles fueron específicamente las transgresiones ni cuál la omisión en la valoración de la prueba
documental o testifical, de hecho o derecho, en la que incurrió la Jueza de Instrucción en lo
Civil.

I.3. Consideraciones de sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de la acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presenta causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen


las siguientes conclusiones:

II.1. Por Sentencia 007/2009 de 29 de enero de 2009, la Jueza Quinta de Instrucción en lo Civil,
declaró improbada la demanda interdicta de obra nueva perjudicial, interpuesta por Sonia Sara
Inchausti Torricos de Paredes, con costas a la parte actora (fs. 82 y vta.) misma que impugnó,
mediante memorial de 6 de febrero del citado año, con los siguientes argumentos: i) Trasgresión
y consiguiente violación de los arts. 1283, 1312 y 1320 del CC y 375 y 397 del CPC, que son de
orden público; ii) La autoridad demandada confunde el motivo del interdicto al señalar el
derecho propietario de los demandados, siendo que está demandando sobre una obra perjudicial
y no sobre la propiedad del inmueble; iii) Contradicción al citar el art. 1463.I del CC, señalando:
"…que al verse privada tanto la demandante como su familia del baño por la demolición del
mismo no puede de modo alguno constituir obra nueva perjudicial…" (sic), existiendo por ende
incoherencia en la Resolución apelada, más aún si no mencionó lo que manifiestan los testigos,
que todos y cada uno de ellos afirman en cuanto a la existencia de un gran perjuicio, tampoco
dice nada sobre las fotos que son prueba contundente; iv) El informe pericial esta
completamente parcializado puesto que ni siquiera presenta fotografía del baño que adoptó en
forma precaria, limitándose a describirlo; y, v) Por último, pide se revoque totalmente la
Sentencia, "por mala apreciación y valoración de la prueba" (fs. 85 a 86 vta.).

II.2. La Jueza Quinta de Partido en lo Civil y Comercial, hoy demandada, resolviendo la


apelación interpuesta, emitió el Auto de Vista de 20 de abril de 2009, confirmando la Sentencia
007/2009, con los siguiente argumentos: a) No es evidente que sus derechos hayan sido
restringidos por los demandados propietarios, siendo que éstos le permitieron habilitar un baño
precario al ser persona ajena al inmueble; b) La afirmación que la Jueza no habría interpretado y
valorado correctamente la prueba, violando los arts. 1283, 1312 y 1320 del CC, no corresponde
al objeto de la demanda, ya que las fotografías no son determinantes para la resolución de la
presente causa, siendo otra la condición de la detentadora de una parte del inmueble, tomando en
cuenta que a los propietarios demandados les asiste realizar trabajos de construcción o
demolición precisamente por esa su condición; c) La demandante no puede ignorar o soslayar
que, para que su acción de interdicto prospere, en su condición de detentadora del inmueble, es
imprescindible que la construcción de obra nueva o daño temido se haya realizado en el
inmueble del vecino contiguo, no dentro del mismo inmueble que habita, por cuanto deben
haber dos inmuebles contiguos de diferentes propietarios en el caso que nos ocupa, la obra
nueva está dentro del inmueble de propiedad de los demandados, entonces no cumple lo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 842
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

dispuesto por el art. 1463.I del CC; d) El informe pericial no es parcializado porque se limitó a
decir que el plano del inmueble está aprobado por la Oficina Técnica de la Alcaldía, para
refuncionalizar los trabajos realizados en el inmueble de los demandados, adjuntando fotografías
de los mismos; e) Las pruebas testificales en forma uniforme señalan haber conocido el anterior
y el actual baño precario, pero desconocen que la actora es sólo detentadora del inmueble,
declaración testifical que no enerva el art. 1463.I del Código citado; y, f) No es coherente que la
detentadora de parte del inmueble, quiera prohibir a los propietarios demandados la refacción,
o/y refuncionalización del inmueble de su propiedad (fs. 109 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan que la autoridad demandada lesionó sus derechos al debido proceso, a la
defensa, la "seguridad jurídica", el acceso a la justicia, a la dignidad, a gozar de una vivienda
adecuada, a la vida, a la salud, al agua, a los servicios básicos, a la niñez y juventud, acceso a la
administración de justicia pronta y oportuna, a la familia y a tener un desarrollo integral, por
cuanto el Auto de Vista de 20 de abril de 2009, no se encuentra debidamente fundamentado, y
no existe pertinencia en la valoración de las pruebas al momento de resolver el recurso de
apelación formulado por su parte. En consecuencia, corresponde analizar, en revisión, si tales
aseveraciones son ciertas, y sin dan lugar o no a conceder la tutela invocada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional.

Esta acción de defensa, es considerada como un instituto fundamental, cuya función principal es
el resguardo o protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales a través de
un mecanismo de defensa rápido, expedito y eficaz por cuanto otorga al individuo una
protección inmediata.

Esta herramienta jurídica que responde a las más urgentes necesidades legales del ciudadano,
denominada acción de amparo constitucional, no es subsidiaria de otros medios de impugnación
ordinarios y está contemplada para proteger derechos y principios fundamentales consagrados en
la Norma Fundamental, cuando éstos son amenazados, restringidos o suprimidos; y procede
contra los actos ilegales y omisiones indebidas de los servidores públicos o particulares que
atenten contra los derechos y garantías reconocidos por la Norma Fundamental, los Convenios,
Tratados Internacionales y las leyes, conforme establecen los arts. 128 y 129 de la CPE,
concordante con el art. 94 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC).

III.2.En cuanto a la legitimación activa en acción de amparo constitucional y el caso


concreto

En cuanto a la persona con legitimación activa para poner en marcha una demanda tutelar, la
Constitución Política del Estado, refiriéndose a la acción de amparo constitucional, dispuso: "…
se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o
por la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución…" (art. 129.I), infiriéndose de
lo dispuesto en los arts. 128 de la Norma Fundamental y 94 de la LTC, que quien considere sus
derechos restringidos, suprimidos o amenazadas, podrá interponer la acción de amparo; por
ende: "...quien se considere afectado en su interés personal, legítimo y directo que afecte sus
derechos fundamentales o garantías constitucionales, por algún acto o hecho emanado de
persona o autoridad, podrá interponer la acción de amparo constitucional en defensa de sus
derechos o garantías conculcadas…" (SC 0276/2010-R de 7 de junio); en efecto: "…tendrá
legitimación activa quien sea titular de uno de los derechos fundamentales o garantías
constitucionales establecidas en la Constitución Política del Estado" (SC 0995/2010-R de 23 de
agosto).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 843
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En ese ámbito, se tiene que ostenta legitimación activa quien es titular del derecho o garantía
supuestamente restringido, suprimido o amenazado, extremo que debe estar claramente
identificado en los antecedentes de la demanda tutelar.

III.2.1.La demanda tutelar planteada el 17 de septiembre de 2009, por Sonia Sara Inchausti
Torricos de Paredes, Santiago Serapio Emanuel, José Gabriel y Zoraida Isabel Paredes Inchausti
por sí y en representación de su hijo menor de edad Wilfredo Mateo Ríos Paredes; Enrique
Paredes Inchausti por sí, y en representación de su hija Ailen Paredes Espada, cuestiona la
emisión del Auto de Vista de 20 de abril del citado año, emitido por la Jueza demandada,
pronunciada dentro del proceso de interdicto que interpuso Sonia Sara Inchauti Torricos de
Paredes, de manera individual, denunciando la construcción de una obra nueva perjudicial en el
inmueble que habitaba; empero, en ningún momento demostró que dicho proceso ordinario lo
haya seguido también en representación de otras personas, las que hoy cursan como accionantes
en la demanda tutelar, extremo que también se evidencia en el recurso de apelación también
interpuesto sólo por la referida accionante y sin presentar documento alguno que le confiera
mandato para actuar en representación de otras personas, a través de memorial de 6 de febrero
de 2009.

Por consiguiente, se comprueba que Santiago Serapio Emanuel, José Gabriel y Zoraida Isabel
Paredes Inchausti por sí y en representación de su hijo menor de edad Wilfredo Mateo Ríos
Paredes; Enrique Paredes Inchausti por sí, y en representación de su hija Ailen Paredes Espada,
no ostentan legitimación activa para interponer esta acción de defensa, dado que no participaron
en la tramitación del proceso interdicto -origen de la problemática planteada-; en consecuencia,
no pueden alegar que sus derechos y garantías fueron restringidos, suprimidos o amenazados, al
no tener fundamento para ello.

Por lo expuesto, al ser Sara Sonia Inchauti Torricos de Paredes, única interviniente en el proceso
ordinario de interdicto y suscribiente del recurso de apelación de 6 de abril de 2009, se tiene
reconocida sólo su legitimación activa y no así la de los otros firmantes de la acción de amparo
constitucional, por lo que corresponde resolver la acción tutelar en cuanto a dicha accionante,
denegándose la misma con relación a los demás actores por falta de legitimación activa.

III.3.Interpretación de la legalidad ordinaria función privativa de la jurisdicción ordinaria


y el caso concreto

Al respecto, la jurisprudencia constitucional reconoció que la interpretación de las normas


aplicables a un caso determinado es una función encomendada a las autoridades que previenen
los procesos en las distintas jurisdicciones; es decir, que constituye su labor privativa, la que
sólo puede ser revisada a través de esta acción tutelar siempre y cuando: "…se hayan vulnerado
los principios constitucionales informadores del ordenamiento jurídico, entre ellos, los de
legalidad, seguridad jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y debido
proceso; caso en el cual el accionante debe invocar y fundamentar cuáles fueron las
infracciones a las reglas de la interpretación admitidas por el derecho. Así la jurisprudencia
constitucional establecida en la SC 1110/2010-R de 27 de agosto, con referencia a este aspecto
señaló: 'La interpretación de la legalidad ordinaria entendida, como aquella labor exclusiva de
los tribunales ordinarios a momento de interpretar y aplicar la norma al caso concreto es
respetada y tomada en cuenta por este Tribunal; puesto que por previsión del art. 179.I de la
CPE 'La jurisdicción ordinaria se ejerce por el Tribunal Supremo de Justicia, los tribunales
departamentales de justicia, los tribunales de sentencia y los jueces; la jurisdicción
agroambiental por el Tribunal y jueces agroambientales; la jurisdicción indígena originaria
campesina se ejerce por sus propias autoridades'; no obstante, también en coherencia con una
de las finalidades del Tribunal Constitucional, que es el respeto y protección a los derechos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 844
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

fundamentales, de manera excepcional y si es que en dicha labor o competencia exclusiva de


interpretación se han lesionado derechos fundamentales, se abre la tutela o protección que
brindan las acciones de defensa" (el negrillas nos nos pertenecen) (SC 939/2011-R de 22 de
junio).

La SC 1110/2010-R de 27 de agosto, definió los requisitos que el accionante debe cumplir para
que excepcionalmente la jurisdicción constitucional analice la facultad de la interpretación de la
legalidad ordinaria, así:

"1) Exponer de manera adecuada, precisa y debidamente fundamentada, los criterios


interpretativos que no fueron cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó
la interpretación de la norma al caso concreto; es decir, por qué le resulta 'insuficientemente
motivada, arbitraria, incongruente, absurda o ilógica o con error evidente, identificando, en su
caso, las reglas de interpretación que fueron omitidas por el órgano judicial o administrativo'

2) Exponer qué principios fundamentales o valores supremos no fueron tomados en cuenta o


fueron desconocidos en la interpretación que considera lesiva a sus derechos, siendo
insuficiente 'la mera relación de hechos o la sola enumeración de las normas legales
supuestamente infringidas'

3) Qué derechos fundamentales han sido lesionados con dicha interpretación que considera
arbitraria y a los resultados que hubiese arribado con la interpretación que indica es la
correcta, 'estableciendo el nexo de causalidad entre estos y la interpretación impugnada; dado
que sólo de esta manera la problemática planteada por el recurrente, tendrá relevancia
constitucional".

III.3.1. Es necesario aclarar que sin bien la accionante Sonia Sara Inchausti Torricos de Paredes,
cuestiona reiterada y expresamente, tanto en el memorial de demanda de amparo constitucional
como en el petitorio, la falta de fundamentación y valoración de la prueba en el Auto de Vista de
20 de abril de 2009, mas no, de manera específica, la interpretación a la que arribó la autoridad
jurisdiccional hoy demandada, del contenido del memorial de la demanda tutelar, así como del
recurso de apelación planteado a través de memorial de 6 de abril de 2009, contra la Sentencia
07/2009, se deduce el cuestionamiento de la interpretación a la que arribó la autoridad a quo
como la Jueza ad quem, actual demandada, del art. 1463.I del CC, que expresa: "El poseedor
puede también denunciar la obra perjudicial emprendida por su vecino mientras ella no esté
concluida y no haya transcurrido un año desde que se inició.", dado que alega que la Jueza
Quinta de Partido en lo Civil y Comercial, equivocadamente concluyó que al encontrarse la obra
nueva en el mismo inmueble que habitaba la entonces demandante de interdicto, al haber sido
realizada por los propietarios del mismo, la demanda no se acomodaría a los alcances de la
norma citada.

De lo explicado, se infiere que la accionante pone en duda la interpretación de la norma del


Código Civil que la Jueza demandada aplicó a su caso concreto, y que sirvió de fundamento para
confirmar la Sentencia 07/2009; sin embargo, al no haber expuesto de manera adecuada, precisa
y debidamente fundamentada qué criterios interpretativos no fueron cumplidos por la autoridad
demandada como tampoco los principios fundamentales o valores supremos fueron
inobservados a momento de interpretar la norma en cuestión ni los resultados que hubiese
arribado con la interpretación supuestamente correcta, dado que no es suficiente la cita de
derechos aparentemente lesionados con la interpretación inferida, conforme se explicó en el
Fundamento Jurídico precedente, por cuanto al ser la interpretación de la legalidad ordinaria
facultad privativa de la Jueza demandada, sólo en casos excepcionales y siempre y cuando la
parte actora haya cumplido los requisitos exigidos y determinados por la jurisprudencia
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 845
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

constitucional, excepcionalmente la jurisdicción constitucional puede ingresar al análisis de la


interpretación cuestionada, lo que en el caso concreto no ocurre.

III.4. En cuanto a la fundamentación y motivación de las resoluciones y la problemática


planteada

Sobre el derecho a la fundamentación y motivación de las resoluciones, como componente del


derecho del debido proceso, la SC 0759/2010-R de 2 de agosto, entre otras, determinó que:
"…la jurisprudencia constitucional ha dejado establecido que el derecho al debido
proceso, entre su ámbito de presupuestos exige que toda resolución sea debidamente
fundamentada; es decir, que cada autoridad que dicte una resolución debe
imprescindiblemente exponer los hechos, realizar la fundamentación legal y citar las
normas que sustentan la parte dispositiva de la misma. Consecuentemente, cuando un juez
omite la motivación de una resolución, no sólo suprime una parte estructural de la misma
sino también en los hechos toma una decisión de hecho no de derecho, que vulnera de
manera flagrante el citado derecho, que permite a las partes conocer cuáles son las
razones para que se declare en tal o cual sentido o lo que es lo mismo, cuál es la ratio
decidendi que llevó al juez a tomar la decisión.

En ese entendido, '…toda autoridad que conozca de un reclamo, solicitud o que dicte una
resolución resolviendo una situación jurídica debe ineludiblemente exponer los motivos
que sustentan su decisión, para lo cual, también es necesario que exponga los hechos
establecidos, si la problemática lo exige, de manera que el justiciable al momento de
conocer la decisión del juzgador lea y comprenda la misma, pues la estructura de una
resolución, tanto en el fondo como en la forma, dejará pleno convencimiento a las partes
de que se ha actuado no sólo de acuerdo a las normas sustantivas y procesales aplicables
al caso sino que también la decisión está normada por los principios y valores supremos
rectores que rigen al juzgador, eliminándose cualquier interés y parcialidad, dando al
administrado el pleno convencimiento de que no había otra manera de resolver los hechos
juzgados, sino de la forma en que se decidió.

(…)

Finalmente, cabe señalar que la motivación no implicará la exposición ampulosa de


consideraciones y citas legales, sino que exige una estructura de forma y fondo. En
cuando a esta segunda, la motivación puede ser concisa, pero clara y satisfacer todos los
puntos demandados, debiendo expresar el juez sus convicciones determinativas que
justifiquen razonablemente su decisión en cuyo caso las normas del debido proceso se
tendrán por fielmente cumplidas. En sentido contrario, cuando la resolución aún siendo
extensa no traduce las razones o motivos por los cuales se toma una decisión, dichas
normas se tendrán por vulneradas' (SC 1365/2005-R de 31 de octubre)" (las negrillas nos
pertenecen), entendimiento reiterado en las SSCC 0890/2010-R, 2883/2010-R y 0882/2011-
R, entre otras.

Por lo expuesto, se tiene que el derecho a la fundamentación y motivación como elemento


esencial del derecho fundamental al debido proceso, permite a las partes procesales, en especial
a la perjudicada, a entender el porque de una determinación asumida respecto a su caso concreto,
la que no necesariamente debe ser ampulosa sino que debe contener una exposición coherente,
específica y debidamente estructurada de los motivos que llevaron a la autoridad jurisdiccional a
asumir una posición respecto a los derechos en litigio.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 846


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.4.1. En la Conclusión II.1 del presente fallo se evidencian los argumentos expuestos por la
accionante en el memorial de apelación de 6 de abril de 2007. Por otro lado, en Conclusiones
II.2, también se corroboran los fundamentos por los que la Jueza demandada determinó
confirmar la Sentencia 07/2009, a través de Auto de Vista de 20 de abril del citado año.

En el referido Auto, la Jueza demandada de manera detallada, en el primer considerando, expuso


los argumentos que la accionante desarrolló en su memorial de impugnación, dedicándose en el
segundo considerando a desarrollar sus fundamentos fácticos y jurídicos, así como las razones o
motivos por los que consideraba que la Sentencia de la Jueza a quo se encontraba enmarcada en
la ley, en ese entendido se evidencia que punto por punto la autoridad jurisdiccional demandada
respondió a cada una de las cuestionantes exhibidas por la accionante, labor en la que se
evidencia una estructura lógica y coherente, que les permite a las partes procesales conocer el
motivo de la decisión de la Jueza ad quem, dado que se refiere tanto a la interpretación que la
Jueza a quo le otorgó a los arts. 1283, 1312, 1320 y 1463.I del CC, así como a los elementos
probatorios consistentes en declaraciones testificales e informe pericial introducido a juicio, que
de acuerdo a razonamiento inferido por la Jueza demandada, no corroboran los argumentos de la
demanda de interdicto; en consecuencia, no se evidencia vulneración del los derechos a una
debida fundamentación y motivación, como elementos configurativos del derecho al debido
proceso.

Ahora bien, analizar si la interpretación de la que fueron objeto las normas jurídicas aplicadas al
caso concreto, se encuadraron en los criterios de razonabilidad o reglas de interpretación, está
fuera del alcance de esta jurisdicción al no haber la accionante fundamentado debidamente su
pretensión, de acuerdo a lo analizado en el Fundamento Jurídico anterior.

III.5. En cuanto a la valoración de la prueba como facultad privativa de las autoridades


ordinarias y el problema jurídico planteado

La jurisdicción constitucional, al constituir una instancia extraordinaria y excepcional para


el conocimiento de posibles vulneraciones de derechos y garantías constitucionales,
mediante diferentes mecanismos de defensa específicamente previstos por la Constitución
Política del Estado para tutelarlos, determinó el siguiente razonamiento en cuanto a la
facultad de valoración de la prueba, que privativamente le corresponde a la jurisdicción
ordinaria, autoimponiéndose una serie de restricciones que hacen a su naturaleza jurídica en
acciones de amparo constitucional, es así que definió que: "La valoración de la prueba y la
dilucidación del fondo del litigio corresponde a las instancias jurisdiccionales ordinarias,
puesto que la función de este Tribunal es la de procurar una tutela efectiva de los derechos
fundamentales y de las garantías constitucionales, no un pronunciamiento de fondo sobre
los hechos, este entendimiento se infiere de la jurisprudencia constitu cional contenida en la
SC 0025/2010-R de 13 de abril, la cual expresamente señala que: '…este Tribunal, en
invariable y reiterada jurisprudencia, ha establecido que la jurisdicción constitucional no
tiene competencia para ingresar a valorar la prueba, dado que ésta compulsa corresponde
exclusivamente a la jurisdicción ordinaria, cuyos jueces y tribunales, conforme a la
atribución que les confiere la Constitución de manera general; y las leyes de manera
específica, deben examinar todo cuanto sea presentado durante el proceso y finalmente
emitir un criterio con la independencia que esto amerita…'.

Se concluye entonces, que la jurisdicción constitucional no puede atribuirse la facultad


valorativa de la prueba, que es exclusiva y privativa de la jurisdicción o rdinaria, la que se
limita a verificar que en la labor de valoración, el juzgador no se hubiese apartado de los
marcos legales de razonabilidad, ni hubiese omitido la consideración de una prueba
presentada en forma legal y que a cuya consecuencia de una o ambas omisiones se
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 847
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

ocasione la lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales, requiriéndose


para esa labor que al momento de impugnarla, el accionante precise de qué manera
considera afectados los principios de razonabilidad y equidad, o demostrar que el
juzgador se apartó de las normas que regulan dicha valoración" (las negrillas nos
pertenecen) (SC 0775/2010-R de de 2 de agosto).

III.5.1. Del memorial de demanda tutelar, se evidencia que la accionante omitió su obligación
de precisar de qué manera considera afectados los principios de razonabilidad y equidad en
la valoración de la prueba efectuada por la Jueza demandada o demostrar en qué medida se
apartó de las normas que regulan dicha valoración, limitándose a señalar que el Auto de Vista
de 20 de abril de 2009, se emitió en ausencia de una "apreciación íntegra de los elementos del
proceso" (sic), insuficiente argumentación que imposibilita a este Tribunal, a analizar
excepcionalmente la labor de valoración de la prueba correspondiente privativamente a las
autoridades ordinarias; por ende, no es posible analizar el cuestionamiento expuesto.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al haber denegado la tutela solicitada, aunque con


otros fundamentos, evaluó parcialmente los datos del proceso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud a


lo previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 203/2011 de 7 de junio, cursante de fs. 191 193, dictada por la Sala
Civil Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal Departamental de
Justicia- de Chuquisaca; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, sin haber ingresado
al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr.Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra.Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dr. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 848


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0081/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Macario Lahor Cortez Chávez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2007-16024-33- RAC
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 003/2007 de 14 de mayo, cursante de fs. 311 a 315 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Jorge Alberto Durán Menacho,
Carlos Eduardo Gómez Rojas y José Armando Urioste Viera, Jueces del departamento de
Beni contra Otto Riess Carvalho, Director Departamental y Marysabel Hurtado Cortez,
Jefe de Recursos Humanos, ambos del Consejo de la Judicatura -ahora Consejo de la
Magistratura- del mismo Departamento.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 9 de mayo de 2007, cursante de fs. 129 a 139, los accionantes
expresan los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A partir del mes de noviembre del año 2006, los demandados fueron atropellando sus derechos
fundamentales, en su condición de autoridades jurisdiccionales, controlando el ingreso y salida
de su fuente laboral, en una suerte de persecución ejercitada sin ningún sustento legal. Producto
de ello se les descontó montos de dinero en relación desproporcionada con los minutos de
atraso, sin proceso previo, siendo sancionados sin que puedan ofrecer sus descargos
correspondientes que la ley les impone, trabajan día y noche, feriados o no, llegando a enterarse
de estos hechos cuando se les abonó el sueldo, a este respecto cursa la nota cite RH-269-07 de
17 de enero de 2007 emitida por la Gerencia de Recursos Humanos del Consejo de la Judicatura,
circular que en correlación al Instructivo CG-CJ-001/02 de 27 de agosto de 2002, determinó la
responsabilidad del Director Distrital del Consejo de la Judicatura, para controlar la asistencia
del personal jurisdiccional, sin tomar en cuenta que ellos son autoridades jurisdiccionales y no
personal administrativo.

Continúan argumentando que la Ley del Consejo de la Judicatura establece con meridiana
claridad que las atribuciones del Consejo se encuentran diferenciadas tanto para los jueces
(funcionarios jurisdiccionales) como para la administración del personal administrativo, no
existiendo base legal alguna que pueda agrupar a dos tipos de servidores públicos que
desempeñan funciones y responsabilidades enteramente diferenciadas, hechos que el propio
"Reglamento Específico de Administración de Personal", reconoce cuando dispone, en el art.
"2", segundo párrafo que: "se excluye de la aplicación del presente Reglamento a los señores:
Presidente y Ministros de la Corte Suprema, Presidente y Magistrados del Tribunal
Constitucional, Consejeros, Presidente y Vocales del Tribunal Agrario y Presidente y Vocales de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 849


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

las Corte Superiores de Distrito, POR SU INVESTIDURA Y POR LA NATURALEZA Y


RESPONSABILIDAD DE SUS FUNCIONES" (sic).

En consecuencia, consideran que el Acuerdo 023/2006 carece de fuerza legal dado que la norma
jurídica que le da vigencia, art. 257 de la Ley de Organización Judicial (LOJ), ha sido
"derogada" mediante la Ley de 18 de enero de 2006 -Ley 2234 de Reformas Orgánicas y
Procesales Reformas a la Ley de Organización Judicial-, facultando a la Corte Suprema de
Justicia de la Nación para que ésta determine el horario judicial, así como los turnos que
cumplirán los juzgados de instrucción en materia penal, para garantizar un servicio
ininterrumpido, mas no la atribución de controlar la asistencia de los jueces; careciendo el
Reglamento anteriormente citado, de fuerza para su aplicación, al ser un instrumento destinado
al control del personal administrativo del Poder Judicial.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Alegan como vulnerados sus derechos al debido proceso, a la defensa, a la presunción de


inocencia, a la "seguridad jurídica", a una justa remuneración, citando al efecto únicamente los
arts. 7 inc. j), 16.II y IV de la Constitución Política del Estado abrogada (CPEabrg.).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se otorgue la tutela a sus derechos vulnerados, y se disponga dejar sin efecto los
descuentos realizados, ordenando la aplicación del art. 65 inc. 3) de la Ley "1760" y la medida
precautoria de no descontar ningún sueldo o salario en tanto no se resuelva la acción,
imponiendo las sanciones a las autoridades demandadas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 14 de mayo de 2007, según consta en el acta cursante de fs.
301 a 310 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción.

Los accionantes, en audiencia ratificaron el tenor íntegro de su demanda.

En audiencia, Jorge Alberto Durán Menacho, alegó: 1) ADEMABE, el 24 de octubre de 2006,


dejó constancia expresa y textual que en reunión ampliada de presidentes de las asociaciones
departamentales de 20 de octubre del citado año, resolvió no acatar ninguna resolución
administrativa del Consejo de la Judicatura emitida en base al Acuerdo "233" por ser ilegal y
nula de pleno derecho, asimismo instruyó a todos los afiliados a respetar su calidad de juez,
jerarquía, autoridad e independencia, sometiéndose únicamente a la ley, nota a la que se aparejó
una solicitud de devolución de descuento; y, 2) Los demandados no pueden argüir falta de
legitimación pasiva, por cuanto fueron ellos los que ejecutaron el descuento e impusieron una
sanción.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas.

Otto Riess Carvalho y Marysabel Hurtado Cortez, Director Distrital y Jefa de Recursos
Humanos del Consejo de la Judicatura del departamento de Beni, respectivamente, a través de
informe escrito cursante de fs. 162 a 171, argumentaron: a) Los agraviados sostienen que el
control que realiza el Consejo de la Judicatura a los jueces no tiene sustento legal, punto que ya
fue decidido por el Tribunal Constitucional, mediante SC 0094/2003 de 22 de septiembre, a
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 850
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

través de un recurso directo de nulidad, donde sostuvieron "…el Tribunal Constitucional sólo
podrá establecer si las autoridades del Consejo de la Judicatura recurridas tenían competencia
para dictar el Acuerdo 108/2003 de 29 de abril…" concluyendo que "…al haberse emitido el
Acuerdo impugnado con las firmas del Presidente de la Corte Suprema de Justicia y Consejo de
la Judicatura y más dos Consejeros en ejercicio, el Pleno del Consejo de la Judicatura estuvo
conformado de acuerdo a lo previsto por ley"; b) Juez no es aquel que se encuentra por encima
de las normas jurídicas, sino el primero sometido a ella, debe ser el ejemplo, el espejo en que
todo litigante debe ver personificada la sencillez, la humildad y el acatamiento a la ley misma; c)
En cuanto al argumento que el Acuerdo 023/06 carece de fuerza jurídica por cuanto el art. 257
de la Ley de Organización Judicial (LOJ) que le da vigencia fue "derogado" mediante Ley de 18
de enero de 2006 -Ley 2234 de Reforma Orgánicas y Procesales Reformas a la Ley de
Organización Judicial- y que dicha ley le faculta a la Corte Suprema de Justicia a determinar el
horario judicial, aspecto este que no puede ser refutado; sin embargo, hasta la fecha dicha
instancia no modificó el horario del poder judicial, no dictó ningún acuerdo en ese sentido, lo
que hace que el horario señalado en la referida Ley se encuentre vigente, si no fuese así muchas
actuaciones dictadas por los jueces dentro del horario conocido podrían ser demandadas de
nulidad; d) El nuevo Reglamento de 14 de septiembre de 2006, dispone en el art. "2" lo
siguiente: "Están sujetas al presente reglamento específico todas las personas que presten sus
servicios en las áreas jurisdiccional o administrativa, dependientes de la Corte Suprema de
Justicia, Tribunal Constitucional, Consejo de la Judicatura, Tribunal Agrario, Cortes Superiores
de Distrito e Instituto de la Judicatura, salvo que para su contratación se hayan establecido
cláusulas contractuales especiales" (sic); en consecuencia, no es verdad que el Reglamento
aplicado para el descuento a los jueces y demás funcionarios sea exclusivamente aplicable al
personal administrativo del Poder Judicial, sino que lo es para todas las categorías de
funcionarios, sean jurisdiccionales o administrativos, con ciertas excepciones como muy bien lo
hicieron notar los agraviados; e) Respecto a la afirmación que el "Reglamento de
Procedimientos Disciplinarios del Poder Judicial" sanciona la inasistencia como falta
disciplinaria grave, art. 22.II y como falta leve, parágrafo III.1, demuestra una manifiesta
confusión acerca de lo que es una falta disciplinaria y una falta administrativa; f) No ostentan
legitimación pasiva dentro de la demanda tutelar interpuesta, por cuanto la autoridad que emitió
los Reglamentos aplicados para los descuentos es el Plenario del Consejo de la Judicatura y no
así el Director Distrital del Consejo de la Judicatura de Beni, Otto Riess Carvalho, como
tampoco Marysabel Hurtado Cortez, en su condición de Jefa de Recursos Humanos de la
Dirección Distrital de ese departamento; g) Los accionantes argumentan que no podría aplicarse
la subsidiaridad por la evidente falta de un procedimiento para hacer valer los derechos
invocados, lo que de ser cierto, dejaría abierta a aplicación del principio de inmediatez; es decir,
que al no existir un procedimiento para hacer valer sus derechos, los accionantes debieron haber
interpuesto la acción tutelar en el plazo de los seis meses, principio determinado por el Tribunal
Constitucional, dado que el pago del mes de octubre se realizó el 3 de noviembre de 2006 y por
lo tanto esa es la fecha en que los actores fueron notificados con sus descuentos, habiéndose
presentado la acción tutelar el 9 de mayo de 2007, lo cual comprueba que transcurrieron seis
meses y seis días. Respecto a no existir otro medio, la última instancia siempre será el Pleno del
Consejo de la Judicatura que es el órgano del Poder Judicial facultado para ejercer el poder
disciplinario y control sobre Vocales, jueces y funcionarios judiciales; h) La Corte Suprema de
Justicia, emitió la Circular de Sala Plena 06/2005 de 14 de septiembre, instruyendo a los
Vocales de las Cortes Superiores del Distrito y Jueces de la República, la obligación que tienen
de cumplir sus labores judiciales en los horarios establecidos en el art. 257 de la LOJ, medida
con la cual el Plenario del Consejo de la Judicatura expresó su plena conformidad por
encuadrarse a las directrices ya emitidas con anterioridad por esta instancia, ratificado mediante
Acuerdo 315/2005 de 8 de noviembre; y, i) José Armando Urioste Viera, Juez Tercero de
Partido en lo Civil, en su condición de Presidente de ADEMABE, el 30 de agosto de 2006,
envió un oficio al Director Distrital del Consejo de la Judicatura, en el que expresó:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 851
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

"…ratificando conversaciones sostenidas con su persona, la ADEMABE, ha adoptado la


decisión de someterse al registro de ingresos dispuesto por el Consejo de la Judicatura…" (sic),
expresión que constituye un acto libre y expresamente consentido; es decir, los accionantes
asumieron una actitud pasiva frente a la determinación del Consejo de la Judicatura, que impuso
el registro de asistencia, en cambio a realizado acciones que reflejan un total consentimiento del
acto.

En audiencia, Otto Riess Carvalho, arguyó: Armando no fue multado en el mes de octubre, mas
si en el mes de febrero, quien además no presentó alguna queja contra nadie; es decir, los
accionantes no concluyeron la vía.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Penal de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Beni, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la
Resolución 003/2007 de 14 de mayo, cursante de fs. 311 a 315 vta., por la que concedió la
tutela, disponiendo dejar sin efecto los descuentos efectuados, entre tanto las sanciones
dispuestas, sean probadas en proceso disciplinario en el que se resguarden las garantías y
derechos de los accionantes, en base a los siguientes argumentos: i) La legitimación activa de los
accionantes esta abundantemente probada en la documentación adjuntada al expediente; en
cuanto a los demandados, su legitimación pasiva está demostrada por cuanto ellos fueron lo que
procedieron a los descuentos hoy cuestionados por los actores, independientemente que sean
órdenes superiores o no; ii) Se tiene que la última nota con relación al descuento de sueldos es
de 17 de enero de 2007; por ende, la acción tutelar no se presentó extemporáneamente; iii) Con
relación a la vulneración del derecho al debido proceso y a la presunción de inocencia, al
haberse procedido a descontar haberes sin conocimiento previo de las personas perjudicadas, en
aplicación del Reglamento de Administración de Personal del Consejo de la Judicatura, que no
prevé mecanismos de descargos previos, la SC 0042/2004 de 22 de abril, entre otras determinó
que toda actividad sancionadora del Estado, sea en el ámbito jurisdiccional o administrativo,
debe ser impuesta previo proceso, en el que se respeten todos los derechos inherentes a la
garantía del debido proceso, en el caso en estudio, se evidencia, por las propias certificaciones
del Consejo de la Judicatura, que no existe un proceso o acción previa donde el ciudadano que
solicita la tutela de amparo pueda ejercer su derecho a la defensa y acredite o descargue el
porqué de sus atrasos; existiendo una evidente sanción, debe aplicarse el criterio de imponerse
previo proceso en el que se respeten todos los derechos inherentes a la garantías del debido
proceso, entre los cuales se encuentra el derecho a la defensa; iv) En cuanto al "derecho a la
seguridad jurídica", si bien el acto normativo puede ser considerado de aplicación exclusiva al
funcionario administrativo, este entendimiento implica que quien determinó la aplicación del
Reglamento con carácter general es el Consejo de la Judicatura en Pleno, instancia que en el
presente amparo no ha sido demandada; sin embargo, la tutela planteada contra el Director
Departamental del Consejo de la Judicatura, la solicitud de revocatoria ante dicha autoridad y la
resolución del Gerente de Recursos Humanos que constan como prueba, evidencia que se está
aplicando una normativa que debe ser aplicada a funcionarios administrativos, no atacando la
validez normativa de dicho acto, sino mas bien la aplicación de la norma a quien no tiene ámbito
de aplicación lo que implica inseguridad jurídica, pues el individuo debe conocer
anticipadamente cuáles son sus derechos y obligaciones abstractamente establecidas en la
norma; en el caso concreto no hay norma aplicable a los jueces, pues se habla de un reglamento
de personal administrativo y jurisdiccional dependiente; y, v) En cuanto al derecho a una justa
remuneración, vinculado al hecho de la escala de descuentos, se puede evidenciar que hay una
desproporción tal que genera una violación a tal derecho, extremo que implica el análisis de una
normativa en abstracto, que debe ser controlada por los mecanismos de tutela constitucional de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 852


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

control posterior de la constitucionalidad de normas, a los que los accionantes podrán acudir en
cualquier momento.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de la normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de la acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presenta causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Realizada la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Mediante nota Cite Of 182-DD-CJ/06 de 24 de octubre de 2006, el Director Distrital del
Consejo de la Judicatura de Beni, Douglas Añez Vargas, puso a conocimiento de María Teresa
Rivero de Cusicanqui, Consejera de la Judicatura, la determinación adoptada por ADEMABE,
dada a conocer al Delegado Distrital del Consejo de la Judicatura del Departamento aludido,
mediante nota de 24 de octubre de 2006, de "NO ACATAR ninguna disposición administrativa
del Consejo de la Judicatura emitida en base al acuerdo 'No. 233/06'" (sic), la que mereció el
proveído de dicha autoridad, en la misma fecha, por la que ratificó la medida adoptada por el
Plenario del Consejo de la Judicatura en coordinación con el "Tribunal Supremo de Justicia"
(sic), hasta tanto no sea el Plenario quien determine lo contrario (fs. 16 y 27).

II.2. Con respecto a dicha determinación, se evidencia que por intermedio de varias notas, el
accionante José Armando Urioste Viera, en su condición de Presidente de ADEMABE,
cuestionó el control de asistencia que ejercía el Consejo de la Judicatura mediante el Director
Distrital; y, los descuentos que se impartían por concepto de atrasos y faltas (fs. 17, 28 a 30 y
38).

II.3. Por Informe 012/2007 de 26 de marzo, elevado por Marysabel Hurtado Cortez, Jefa de
Recursos Humanos a Otto Riess Carvalho, Director Distrital del Consejo de la Judicatura de
Beni, acreditó los siguientes extremos: a) A José Armando Urioste Viera, en febrero no se le
gravó ningún descuento "ilegal", sino un descuento "legal" de medio día de haber por atrasos
incurridos en el mes de enero de dicha gestión; b) No se realizó notificación por cuanto
mediante Circular de la Dirección Distrital se hizo conocer los mecanismos en la otorgación de
tolerancias, licencias y otros beneficios a los administradores de justicia, en el que no se
especificaba en ningún punto la notificación posterior para descargo; c) Los parámetros de
descuentos se establecieron en la Circular GRH-CJ-009, instruidos en el Acuerdo 108/2003 y
corroborados en la SC 0094/2003 de 22 de septiembre; d) No se presentó ningún descargo; y, e)
Los atrasos son verificados en la planilla de control de jueces, número que encuadra en los
"parámetros establecidos" (sic), tomando en cuenta previamente los avisos por demoras, faltas y
otros imprevistos que tuvieron los administradores de justicia y que fueron comunicados
oportunamente a la encargada de control y registro (fs. 20).

II.4. A través de formulario de atrasos, faltas y abandono de jueces correspondientes a octubre


de 2006, consta el descuento del accionante Carlos Eduardo Gómez Rojas, con la multa de
cuatro días de haber; también se verifica el descuento de un día de haber a Jorge Alberto Durán
Menacho (fs. 26).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 853
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.5. Por informe 009/2007 de 8 de febrero, la Jefa de Recursos Humanos, dirigiéndose al


Director Distrital del Consejo de la Judicatura, detalló los atrasos y faltas de algunos
funcionarios judiciales, constando el descuento por atrasos y salidas anticipadas de un día de
haber a Carlos Eduardo Gómez Rejas; y, de medio día de haber a José Armando Urioste Viera,
correspondiente al mes de febrero de la citada gestión, la misma que pasó a conocimiento de la
Habilitada para proceder a los descuentos especificados (fs. 23 a 24).

II.6. No consta que los actores, en su condición de Jueces del departamento de Beni, de manera
individual, hayan cuestionado el descuento que se efectuó a su sueldo del mes de octubre de
2006 y de enero y febrero de 2007.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan la vulneración de sus derechos al debido proceso, a la defensa, a la


presunción de inocencia, a la "seguridad jurídica", y a una justa remuneración, por cuanto a
partir de noviembre del año 2006, fueron objeto de una persecución ilegal a través del control de
ingreso y salida de su fuente laboral, sin ningún sustento legal, provocando una serie de
descuentos en relación desproporcionada con los minutos de atraso, sin permitirles un proceso
justo, dentro del cual puedan presentar sus descargos antes que la medida sea ejecutada y
obviando su condición de autoridades jurisdiccionales, diferente a la del personal administrativo.
En consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes y si
constituyen actos ilegales lesivos de los derechos fundamentales o garantías constitucionales de
los actores, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza Jurídica del la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional constituye una garantía jurisdiccional extraordinaria, que


posibilita el efectivo ejercicio de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución
Política del Estado, tratados y convenios internacionales y las leyes y "…tendrá lugar contra
actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley." (art. 128 de la CPE), siempre que no hubiere otro medio o recurso
legal para su protección; es decir, que esta acción constitucional se activa cuando no existen
otros medios o vías idóneas ordinarias para otorgar la tutela solicitada, característica reconocida
como el principio de subsidiariedad.

III.2. Principio de subsidiariedad en la acción de amparo constitucional

En cuanto al principio de subsidiariedad que ostenta esta acción de defensa, la Norma


Fundamental, dispone que puede ser activada por la persona "…que se crea afectada, por otra a
su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la
Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados" (art. 129.I de la CPE); confirmándose que, no puede ser considerada como un
instrumento alternativo o sustitutivo de los recursos o acciones ordinarias de defensa que la
Constitución y la ley asignan a las distintas jurisdicciones, sean judiciales o administrativas. En
coherencia con lo antedicho, el art. 96.3 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC), determina
que el recurso de amparo, actualmente configurada como acción, no procederá contra: "Las
resoluciones judiciales que por cualquier otro recurso puedan ser modificadas o suprimidas aún
cuando no se haya hecho uso oportuno de dicho recurso", en similar sentido el art. 76 de la Ley
del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), dispone: "La Acción de Amparo no
procederá cuando exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 854
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

y garantías restringidos, suprimidos o amenazados.", disposiciones que corroboran que esta


acción tutelar no es posible utilizarla si es que previamente no se agotó la vía ordinaria de
defensa; de lo que se extraen las siguientes sub reglas de improcedencia del amparo por
subsidiariedad, cuando: "1) las autoridades judiciales o administrativas no han tenido la
posibilidad de pronunciarse sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un medio de
defensa ni ha planteado recurso alguno, así: a) cuando en su oportunidad y en plazo legal no se
planteó un recurso o medio de impugnación y b) cuando no se utilizó un medio de defensa
previsto en el ordenamiento jurídico; y 2) las autoridades judiciales o administrativas pudieron
haber tenido o tienen la posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios
de defensa, así: a) cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se daría en
casos de planteamientos extemporáneos o equivocados y b) cuando se utilizó un medio de
defensa útil y procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo no se
agotó, estando al momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de
resolución. Ambos casos, se excluyen de la excepción al principio de subsidiariedad, que se da
cuando la restricción o supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados,
ocasionen perjuicio irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional,
procede la tutela demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de
resolución." (SSCC 1337/2003-R de 15 de septiembre, entendimiento acorde al orden
constitucional vigente, asumido por las SSCC 0913/2010-R, 1073/2010-R, 1503/2010-R y
418/2011-R entre otras).

III.3. El acto administrativo y la posibilidad de impugnarlo

Con relación a la declaración unilateral de la administración en cualquiera de sus niveles,


emergente del ejercicio de la potestad administrativa, plasmada en una decisión que
genera efectos jurídico administrativos directos o inmediatos, que se caracterizan por su
ejecutoriedad para la consecución de los fines públicos y por su presunción de legalidad y
legitimidad (SC 1074/2010-R de 23 de agosto), la Ley de Procedimiento Administrativo
(LPA) en el art. 27, dispone: "Se considera acto administrativo, toda declaración,
disposición o decisión de la Administración Pública, de alcance general o particular,
emitida en ejercicio de la potestad administrativa, normada o discrecional, cumpliendo con
los requisitos y formalidades establecidos en la presente Ley, que produce efectos jurídicos
sobre el administrado. Es obligatorio, exigible, ejecutable y se presume legítimo."

En ese ámbito, Gordillo expresa que: "…los problemas de la validez e impugnación de la


actividad administrativa giran en torno a un principio: el de que puede atacarse mediante un
recurso administrativo o acción judicial aquel acto de la administración que produzca efectos
jurídicos inmediatos respecto del impugnante; todo acto de la administración (o no) que de suyo
no produzca efectos jurídicos, no es todavía directamente impugnable en cuanto a su validez…"
(Gordillo, Agustín. Tratado de Derecho Administrativo. Tomo 3 "El acto Administrativo",
Lima- Perú.2003 Ed. Ara).

En consecuencia, se concluye que ante la exteriorización de la voluntad de la administración


pública, debe impugnarse la decisión que afecta al administrado a través del recurso de
revocatoria, ante la misma autoridad que la emitió, debiendo plantear el recurso jerárquico, una
vez resuelto el de revocatoria o de producido el silencio administrativo negativo, ante la misma
autoridad que resolvió este, quien debe elevarlo para su conocimiento y resolución, ante la
autoridad superior competente.

III.4. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 855


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Para el análisis de la problemática planteada, es necesario hacer hincapié en el hecho que la


acción de amparo constitucional se interpuso por Jorge Alberto Durán Menacho, Carlos Eduardo
Gómez Rojas y José Armando Urioste Viera, en su condición de Jueces del departamento de
Beni, y no así como integrantes de la ADEMABE, que aglutina a los jueces de ese
Departamento. Si bien consta en antecedentes que en reiteradas ocasiones la mencionada
Asociación planteó una serie de cuestionamientos al régimen de control al que estaban siendo
sometidos todos los jueces del Departamento, lo hizo el último de los nombrados como su
Presidente y no a título personal, condición en la que, tanto él como los coaccionantes, actúan en
la presente demanda tutelar.

En ese contexto, es necesario referirse al Reglamento Específico de Administración de Personal,


normativa que a decir de los accionantes -por cuanto no consta en antecedentes- fue aprobado
por Acuerdo 023/2006 por el Pleno del Consejo de la Judicatura, documento que les da potestad
a las diferentes Direcciones Distritales del Consejo de la Judicatura a ejercer un control de
asistencia a todos los funcionarios judiciales y administrativos del Poder Judicial, incluidas las
autoridades jurisdiccionales, excepcionando sólo al Presidente del Plenario del Consejo,
Consejeros, Ministros, Magistrados, Presidente de la Corte Superior del Distrito, Vocales,
Gerente General, Gerentes de Área, Asesores y Jefes de Oficinas Administrativas de Distrito
(art. 21 del referido Reglamento). Conforme se evidencia en antecedentes, el citado Acuerdo, a
pesar de ser una exteriorización de la voluntad de la administración pública, en este caso, del
Consejo de la Judicatura, no fue puesto en duda por los accionantes, en su condición de Jueces
del Distrito Judicial de Beni, a través del recurso de revocatoria, asimismo, los descuentos
dispuestos por la Jefa de Recursos Humanos, hoy demandada, correspondientes a octubre de
2006, enero y febrero de 2007, de acuerdo a lo desarrollado en Conclusiones II.3, II.4 y II.5,
tampoco fueron cuestionados a través del recurso de revocatoria ante la misma autoridad que las
dispuso, para así activar la vía administrativa, con la finalidad de presentar sus descargos y
desvirtuar los motivos por los que les impusieron las multas por los minutos de atraso a su
fuente laboral.

Al no haber impugnado los actos administrativos descritos, ni otorgado la oportunidad a los


demandados para que revisen sus decisiones, a pesar de existir la posibilidad de hacerlo, no
agotaron la vía administrativa como correspondía en el presente caso, lo que conlleva la
aplicación del razonamiento referente al principio de subsidiariedad en la problemática
planteada, el cual implica el agotamiento de los mecanismos de defensa ordinarios,
jurisdiccionales o administrativos, antes de activar la vía constitucional a través del amparo
constitucional, por cuanto este no es sustituto de los recursos establecidos en la ley; en
consecuencia, la inobservancia del referido principio hace imposible el análisis de fondo de la
problemática planteada.

En consecuencia el Tribunal de Garantías al haber concedido la tutela solicitada, no examinó


adecuadamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo debiendo, en su lugar,
haberla denegado.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud a


lo previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución 003/2007 de 14 de mayo, cursante de fs. 311 a 315 vta., pronunciada
por la Sala Penal de la Corte Superior de Justicia del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Beni; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 856
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0082/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Macario Lahor Cortez Chávez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19565-40-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 027/2011 de 19 de julio, cursante de fs. 158 a 160, pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional interpuesta por Reynaldo Gualberto Guzmán
Amurrio, Gerente Jurídico Nacional; Ángel Raúl Sandy Méndez, Jefe del Departamento
de Gestión Legal; y, Javier Otto Roger Alba Braun, Abogado de la Gerencia Nacional
Jurídica, todos de la Aduana Nacional de Bolivia; y, José Miguel Santalla Sandoval, Jefe
de la Unidad de la Gerencia Regional de la Aduana La Paz en representación legal de
Wilfredo Vargas Valdez, Presidente Ejecutivo a.i. de la Aduana Nacional de Bolivia contra
Teresa Vera Loza, Fiscal de Distrito a.i., Jorge Gutiérrez Roque, ex Fiscal del Distrito y
Edward Omar Mollinedo Pinedo, Fiscal de Materia todos de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 27 de marzo de 2009, cursante a fs. 75 a 83 vta., los


accionantes por su representado, deducen acción de amparo constitucional, expresando los
siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 8 de noviembre de 2006, la Aduana Nacional presentó denuncia formal contra Verónica


Mallea Rada y Patricia del Carmen Gumucio Guachalla, por la presunta comisión de los delitos
de incumplimiento de deberes y ejercicio indebido de la profesión respectivamente, sancionados
por los arts. 154 y 164 del Código Penal (CP).

Mediante comunicación interna AN-UTIPC-268/2006, el Coordinador de la Unidad Técnica de


Inspección de Servicios Aduaneros (UTISA), dependiente de la Aduana Nacional, remitió a la
Gerencia Nacional Jurídica el informe AN-UTIPC-085/06 de 22 de septiembre de 2006, en el
que aseveró que después de efectuar la revisión documental de las carpetas personales de los
funcionarios de la Unidad de Servicio a Operadores de la Aduana Nacional, se encontró
irregularidades en la carpeta personal de la funcionaria Patricia del Carmen Gumucio Guachalla,
en sentido que la misma no cumplía con los requisitos exigidos a momento de asumir el cargo,
al carecer de título profesional en provisión nacional y que dicho título recién le fue otorgado el
16 de noviembre de 2005, siendo así que para el cargo presentó únicamente un certificado de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 857
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

egreso y de esta manera no calificaba en la convocatoria pública, a cuyo efecto habría incurrido
en ejercicio ilegal de la profesión, por cuanto en los actos que realizó y los documentos que
emitió y suscribió como Supervisora, anteponía a su nombre la abreviatura "Lic.", en cuya
consecuencia transgredió los arts. 12, 15 y 16 del D.L. 12042 de 6 de diciembre de 1974. Ley
del Economista.

Por otra parte, Verónica Mallea Rada, como Jefa de Recursos Humanos de la Aduana Nacional,
al omitir comprobar, verificar y avalar los documentos correspondientes conforme correspondía
en cumplimiento de las Normas Básicas de Administración de Personal, incumplió los deberes
inherentes al ejercicio de su cargo, como ser la verificación de antecedentes profesionales,
permitiendo en suma el indebido ejercicio de la profesión por parte de la funcionaria Patricia
Gumucio Guachalla.

Como consecuencia de la denuncia formal realizada por la Aduana Nacional, la Fiscal de


materia Tania Alfaro, mediante Resolución 09/07 de 7 de diciembre de 2007, resolvió imputar a
Verónica Mallea Rada y Patricia del Carmen Gumucio Guachalla, por existir en su contra
suficientes indicios de la existencia del hecho y la participación de las imputadas por los delitos
de incumplimiento de deberes y ejercicio indebido de la profesión; empero, el Fiscal demandado
Edward Omar Mollinedo Pinedo, sin haber intervenido ni participado en la investigación, dictó
la Resolución 003/2008 de 4 de agosto, por la cual sobreseyó a las imputadas, determinación
que una vez impugnada por José Miguel Santalla Sandoval, abogado apoderado de la Aduana
Nacional, fue resuelta por la Fiscal de Distrito de La Paz, Teresa Vera Loza, quien mediante
Resolución 673/08 de 8 de septiembre del mismo año, confirmó la Resolución de
sobreseimiento, pronunciamientos en los que no hubo una compulsa correcta y responsable de
los antecedentes cursantes en el cuaderno investigativo, ya que omitieron referirse a los
contundentes documentos aportados como prueba de cargo, omisión gravísima en la
fundamentación de ley y valoración de los hechos; además, pretendieron soslayar el derecho que
toda persona tiene a conocer las razones y los fundamentos por los cuales se resuelven la causas,
denegándoles sus peticiones.

I.1.2. Derecho, garantía y principio supuestamente vulnerados

Los accionantes alegan la vulneración de la garantía del debido proceso, principio de


congruencia y derecho a la "seguridad jurídica", de la entidad que representa su mandante,
citando al efecto únicamente los arts. 7 inc. a) y 16.II de la Constitución Política del Estado
abrogada (CPEabrg).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se conceda la tutela invocada, disponiendo la nulidad de las Resoluciones de


sobreseimiento y su ratificatoria 003/2008 de 4 de agosto y 673/08 de 8 de septiembre de 2008,
respectivamente.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública, el 19 de julio de 2011, según consta en el acta cursante de fs.
147 a 157 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante Javier Otto Roger Alba Braun, único actor presente en audiencia,
ratificó los términos de su memorial de demanda.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 858
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los representantes del Ministerio Público demandados, no asistieron a dicho actuado procesal,
pese de su legal citación (fs. 108 y 109).

I.2.3. Informe de la tercera interesada

Verónica Mallea Rada, no asistió a la audiencia de amparo constitucional, en tanto Patricia del
Carmen Gumucio Guachalla, alegó a través de su abogado lo siguiente: a) En el momento de la
convocatoria no era necesario tener el título profesional; b) El año 2002 la Aduana Nacional
recién emitió una Resolución que aprueba el manual de puestos de la institución; y, c) La
empresa encargada de emitir la convocatoria, Price Waterhouse Coopers, de preseleccionar a los
candidatos y determinar el mayor puntaje obtenido, señala que tratándose de la segunda
convocatoria, no requirió el título en provisión nacional para el cargo de Supervisor de Servicio
de Operadores, esto en conformidad a la aprobación de la Aduana Nacional.

I.2.4. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Civil Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial de La
Paz, ahora Tribunal Departamental de Justicia, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la
Resolución 027/2011 de 19 de julio, cursante de fs. 158 a 160, por la que concedió en parte la
tutela solicitada, disponiendo la nulidad de la Resolución 673/08 de 8 de septiembre de 2008,
dictada por la entonces Fiscal de Distrito a.i. de La Paz, Teresa Vera Loza; y, consecuentemente
se pronuncie una nueva resolución fundamentada y motivada de acuerdo a los antecedentes de la
investigación penal efectuada, conforme al siguiente fundamento: i) A momento de presentarse
la procesada, Patricia del Carmen Gumucio Guachalla, a la convocatoria pública elaborada por
Price Waterhouse Cooper, para optar el cargo de Supervisor de Servicios a Operadores, para la
oficina central de la Aduana Nacional , se requería el título de profesional en ciencias
económico financieras o comercio exterior, aspecto sobre el que el Ministerio Público no se
pronunció; ii) Tampoco se pronuncio sobre la existencia del Manual de Funciones de 2001,
vigente a tiempo de lanzar la Convocatoria de provisión de cargos; y, iii) no se especificó qué
autoridad suscribió el memorando de designación de la denunciada, aspectos sobre los cuales el
Ministerio Público, a través de sus dos instancias, Fiscales Anticorrupción y Fiscalía del
Distrito, no se refirieron en las Resoluciones 003/2008 y la 673/08.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011 la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012 a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la debida revisión y compulsa de los antecedentes cursantes en el expediente, se llega a las


conclusiones siguientes:

II.1. Por Resolución 003/2008 de 4 de agosto, se tiene que Edward Omar Mollinedo Pinedo,
Fiscal de Materia, decidió requerir el sobreseimiento de Patricia del Carmen Gumucio
Guachalla, por la presunta comisión del delito de ejercicio indebido de la profesión, y de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 859
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Verónica Mallea Rada, por la probable comisión del delito de incumplimiento de deberes,
conductas antijurídicas que se atribuyeron en la Resolución de imputación formal 09/2007,
pronunciada por Tania Alfaro, Fiscal de Materia, cuyo fundamento es que al momento de
convocarse para la preselección del cargo de referencia no era requisito tener el título de
licenciatura, aspecto consentido por la Aduana Nacional como por la empresa seleccionadora de
personal, por lo que no existiría suficientes elementos probatorios como para fundar una
acusación (fs. 69 a 71vta).

II.2. Mediante Resolución 673/08 de 8 de septiembre de 2008, Teresa Vera Loza, Fiscal de
Distrito a.i. de La Paz, resolvió ratificar la Resolución de sobreseimiento 03/2008, disponiendo
la conclusión del proceso con relación a las imputadas Patricia del Carmen Gumucio Guachalla
y Verónica Mallea Rada, la cesación de las medidas cautelares impuestas en su contra y la
cancelación de sus antecedentes penales, con el fundamento contradictorio de que " existirían
actos investigativos encontrados como pendientes por realizar, estos no se practicaron" (
Fundamento 5to de la Resolución jerárquica (fs. 67 vta ); y, que, del análisis realizado por el
fiscal Mollinedo en la Resolución de sobreseimiento ha generado en el mismo la convicción de
que, con referencia a los hechos incriminados no se adecúan típicamente a los delitos
denunciados, conclusión a la que se arriba además, el no haberse cumplido con los análisis
documentales sugeridos y que el haber utilizado la abreviatura "lic" no acredita ejercicio ilegal
de la profesión ( fs. 66 a 68 )

II.3. A fs. 3 a 4 cursa el Reglamento de Preselección para Cargos Jerárquicos y no Jerárquicos


de la Aduana Nacional de Bolivia, en dicho Reglamento se tiene que para el cargo de Supervisor
de Servicios a Operadores, se requería una formación de profesional en ciencias económico
financieras o comercio exterior.

II.4. A fs. 38 se tiene el título de economista de Patricia del Carmen Gumucio Guachalla,
expedido por la Universidad Mayor de San Andrés, el 16 de noviembre de 2005 y la designación
en el cargo de Supervisor de Servicios a Operadores según la literal de fs. 35 es de 4 de junio de
2001.

II.5. A fs. 5 cursa el oficio de 5 de junio de 2008, por lo que el Comité Ejecutivo de la
Universidad Boliviana hace conocer a Patricia del Carmen Gumucio Guachalla, los conceptos de
licenciatura, profesional, profesional universitario y egresado; en el punto cuatro del
mencionado certificado al referirse al último concepto expresa "egresado". No existe la
condición académica de egresado de la universidad. La simple conclusión de estudios en una
facultad carrera o instituto no habilita el ejercicio profesional alguno, por cuanto la aprobación
de una modalidad de graduación, es requisito esencial de titulación.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes denuncian la vulneración de los derechos y garantías de la institución a la que


representa su mandante, por cuanto el Fiscal de Materia, a raíz de una denuncia que presentó la
Aduana Nacional contra dos funcionarias por la supuesta comisión de delitos de incumplimiento
de deberes y ejercicio indebido de la profesión, pronunció Resolución de sobreseimiento sin la
compulsa y consideración debida con referencia a la generalidad de las pruebas y que esta
Resolución fue confirmada por la Fiscal de Distrito sin mayores objeciones ni consideración
respecto de dichas pruebas; al respecto corresponde analizar la problemática planteada, a efectos
de que éste Tribunal verifique si es que existió o no vulneración de derechos y garantías
constitucionales, a fin de conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. La acción de amparo constitucional y la valoración de la prueba


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 860
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

La jurisprudencia constitucional estableció límites para la procedencia de acciones


constitucionales contra las decisiones judiciales, así como también construyó la doctrina de las
autorestricciones para la jurisdicción constitucional, siendo una de ellas la que establece que esta
instancia extraordinaria no puede valorar la prueba por ser esa una actividad privativa de los
jueces y tribunales ordinarios, definido así por la SC SC 0577/2002-R, al determinar:"…la
facultad de valoración de la prueba aportada corresponde privativamente a los órganos
jurisdiccionales ordinarios, por lo que el Tribunal Constitucional no puede pronunciarse sobre
cuestiones que son de exclusiva competencia de los jueces y tribunales ordinarios, y menos
atribuirse la facultad de revisar la valoración de la prueba que hubieran efectuado las
autoridades judiciales competentes." (entendimiento asumido por la SC 0343/2010-R de 15 de
junio, acorde al ordenamiento constitucional vigente).

"No obstante de lo señalado, en resguardo de los derechos humanos y fundamentales la propia


doctrina de este Tribunal ha establecido excepciones, así la SC 0129/2004-R de 28 de enero,
señaló que: '…en resguardo de los derechos fundamentales a la seguridad jurídica, el acceso a
la justicia y a una tutela efectiva (…) este Tribunal puede analizar la conducta omisiva del
representante del Ministerio Público, el juez cautelar u otra autoridad competente para
intervenir en la etapa preparatoria; conductas omisivas expresadas, entre otras, en no recibir,
producir o compulsar cierta prueba inherente al caso, en no recibir o providenciar memoriales
denegando el derecho de petición, en no realizar actos solicitados por las partes a fin de
demostrar su acusación o desvirtuar la misma, en negar el trámite de las impugnaciones o, en
su caso, en la no aplicación objetiva de la Ley pertinente al caso; en consecuencia, la denuncia
sobre las omisiones referidas podrá ser de conocimiento de este Tribunal y examinado el caso,
se tendrá o no que otorgar la tutela. Empero es necesario dejar claro, que en lo relativo a
prueba, la competencia sólo se reduce a establecer si fue o no valorada, pero no a imponer
mediante este recurso cómo debe ser compulsada y menos a examinarla, lo que significa, que
sólo se deberá disponer en casos de omisión de compulsa que se la analice siempre que curse
en el expediente y que hubiera sido oportunamente presentada…'" (SC 1637/2010-R de 15 de
octubre).

Siguiendo esa línea, la SC 2536/2010-R de 19 de noviembre, mencionó algunas subreglas para


la revisión excepcional por parte de la justicia constitucional de la valoración de la prueba
efectuada por la justicia ordinaria, señalando que solamente se efectuará "…cuando en dicha
valoración: a) exista apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad
previsibles para decidir; o, b) cuando se haya adoptado una conducta omisiva expresada,
entre otras, en no recibir, producir o compulsar cierta prueba inherente al caso y, su lógica
consecuencia sea la lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales; dicha
competencia del Tribunal Constitucional, se reduce, en ambos casos, a establecer la ausencia
de razonabilidad y equidad en la labor valorativa o la actitud omisiva en esta tarea, pero en
ningún caso a sustituir a la jurisdicción ordinaria examinando la misma.

En ese orden de razonamiento para que este Tribunal pueda cumplir con esta tarea, es
necesario que la parte procesal, que se considera agraviada con los resultados de la valoración
efectuada dentro de un proceso judicial o administrativo, invocando la lesión a sus derechos
fundamentales, exprese de manera adecuada y precisa en los fundamentos jurídicos que
sustenten su posición (recurso de amparo), lo siguiente: Por una parte, qué pruebas (señalando
concretamente) fueron valoradas apartándose de los marcos legales de razonabilidad y equidad
previsibles para decidir (…) Asimismo, es imprescindible también, que el recurrente señale en
qué medida, en lo conducente, dicha valoración cuestionada de irrazonable de inequitativa o
que no llegó a practicarse, no obstante haber sido oportunamente solicitada, tiene incidencia en
la Resolución final; por cuanto, no toda irregularidad u omisión procesal en materia de prueba
(referida a su admisión, a su práctica, a su valoración, etc.) causa por sí misma indefensión
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 861
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

material constitucionalmente relevante, correspondiendo a la parte recurrente, demostrar la


incidencia en la Resolución final a dictarse, es decir, que la Resolución final del proceso
hubiera podido ser distinta de haberse practicado la prueba omitida, o si se hubiese practicado
correctamente la admitida, o si se hubiera valorado razonablemente la compulsada; puesto que
resulta insuficiente, para la viabilidad del recurso de amparo, la mera relación de hechos;
porque sólo en la medida en que el recurrente exprese adecuada y suficientemente sus
fundamentos jurídicos, la jurisdicción constitucional podrá realizar la labor de contrastación,
que amerita este tema de revisión excepcional de la labor de la valoración de la prueba
realizada por la jurisdicción ordinaria; máxime si se tiene en cuenta que el art. 97 de la LTC,
ha previsto como un requisito de contenido, el exponer con precisión y claridad los hechos que
le sirvan de fundamento y precisar los derechos o garantías que se consideren restringidos,
suprimidos o amenazados, señalando en qué consiste la restricción o supresión".

Es necesario resaltar que ese entendimiento ha sido ratificado ya en vigencia de la actual


Constitución Política del Estado, por lo que es plenamente aplicable; así la SC 0330/2010-R de
15 de junio, señaló que: '…es necesario recordar que la jurisprudencia del Tribunal
Constitucional estableció que en los casos que se impugnan actos y resoluciones de las
autoridades jurisdiccionales ordinarias, la jurisdicción constitucional no puede ingresar a
valorar la prueba producida durante el proceso, porque esa labor corresponde exclusivamente
a las autoridades jurisdiccionales ordinarias. Por lo tanto, el recurso, ahora acción de amparo
constitucional, no es una instancia procesal más de revisión de resoluciones, eso está instituido
por la propia jurisprudencia del Tribunal Constitucional, que dentro de esa línea de
razonamiento estableció de manera uniforme, que al conocer y resolver una acción de amparo
constitucional, la jurisdicción constitucional no examina la valoración de la prueba realizada
en la jurisdicción ordinaria, salvo cuando el juzgador se hubiese apartado de las previsiones
legales que rigen el acto procesal como de los marcos legales de razonabilidad y equidad, o
cuando se hubiere omitido arbitrariamente valorar la prueba y su lógica consecuencia sea la
lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales…'" (las negrillas nos
pertenecen).

III.2. El debido proceso y la motivación de las resoluciones

En su reiterada jurisprudencia este Tribunal ha señalado que el debido proceso consiste en: "…el
derecho de toda persona a un proceso justo y equitativo en el que sus derechos se acomoden a
lo establecido por disposiciones jurídicas generales aplicables a todos aquellos que se hallen en
una situación similar (…) comprende el conjunto de requisitos que deben observarse en las
instancias procesales, a fin de que las personas puedan defenderse adecuadamente ante
cualquier tipo de acto emanado del Estado que pueda afectar sus derechos" (SSCC 0418/2000-
R, 1276/2001-R y 0119/2003-R, entre otras).

La fundamental trascendencia jurídica del debido proceso se encuentra en su íntima relación con
la realización del valor justicia en cualquier clase de procedimiento, así lo ha entendido el
Tribunal Constitucional en la SC 0999/2003-R de 16 de julio, al señalar que: "La importancia
del debido proceso está ligada a la búsqueda del orden justo. No es solamente poner en
movimiento mecánico las reglas de procedimiento sino buscar un proceso justo, para lo cual
hay que respetar los principios procesales de publicidad, inmediatez, libre apreciación de la
prueba; los derechos fundamentales como el derecho a la defensa, a la igualdad, etc., derechos
que por su carácter fundamental no pueden ser ignorados ni obviados bajo ningún justificativo
o excusa por autoridad alguna, pues dichos mandatos constitucionales son la base de las
normas adjetivas procesales en nuestro ordenamiento jurídico, por ello los tribunales y jueces
que administran justicia, entre sus obligaciones, tienen el deber de cuidar que los juicios se
lleven sin vicios de nulidad, como también el de tomar medidas que aseguren la igualdad
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 862
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

efectiva de las partes" . En el mismo sentido la SC 0305/2010-R de 7 de junio, anotó que: "…el
debido proceso, es entendido como el derecho de toda persona a un proceso justo y equitativo,
en el que entre otros aspectos, se garantice al justiciable el conocimiento o notificación
oportuna de la sindicación para que pueda estructurar eficazmente su defensa, el derecho a ser
escuchado, presentar pruebas, impugnar, el derecho a la doble instancia; en suma, se le dé la
posibilidad de defenderse adecuadamente de cualquier tipo de acto emanado del Estado, donde
se encuentren en riesgo sus derechos; por cuanto, la garantía del debido proceso no sólo es
aplicable en el ámbito judicial, sino también en el administrativo", (Entendimiento que también
se ha plasmado, entre otras, en las SSCC 0281/2010-R, 0327/2010-R, 0460/2010-R y
0461/2010-R y 2536/2010-R).

La motivación de las resoluciones es un elemento del debido proceso, en ese sentido, la


jurisprudencia del Tribunal Constitucional ha sido reiterada y uniforme al señalar que las
resoluciones de las autoridades judiciales deben exponer los hechos, realizar la fundamentación
legal y citar las normas que sustentan la parte dispositiva de esas resoluciones; así la SC
1365/2005-R de 31 de octubre, señaló que:"…es necesario recordar que la garantía del debido
proceso, comprende entre uno de sus elementos la exigencia de la motivación de las
resoluciones, lo que significa, que toda autoridad que conozca de un reclamo, solicitud o que
dicte una resolución resolviendo una situación jurídica, debe ineludiblemente exponer los
motivos que sustentan su decisión, para lo cual, también es necesario que exponga los hechos
establecidos, si la problemática lo exige, de manera que el justiciable al momento de conocer la
decisión del juzgador lea y comprenda la misma, pues la estructura de una resolución tanto en
el fondo como en la forma, dejará pleno convencimiento a las partes de que se ha actuado no
sólo de acuerdo a las normas sustantivas y procesales aplicables al caso, sino que también la
decisión está regida por los principios y valores supremos rectores que rigen al juzgador,
eliminándose cualquier interés y parcialidad, dando al administrado el pleno convencimiento de
que no había otra forma de resolver los hechos juzgados sino de la forma en que se decidió.

Al contrario, cuando aquella motivación no existe y se emite únicamente la conclusión a la que


ha arribado el juzgador, son razonables las dudas del justiciable en sentido de que los hechos
no fueron juzgados conforme a los principios y valores supremos, vale decir, no se le convence
que ha actuado con apego a la justicia, por lo mismo se le abren los canales que la Ley
Fundamental le otorga para que en búsqueda de la justicia, acuda a este Tribunal como
contralor de la misma, a fin de que dentro del proceso se observen sus derechos y garantías
fundamentales, y así pueda obtener una resolución que ordene la restitución de dichos derechos
y garantías, entre los cuales, se encuentra la garantía del debido proceso, que faculta a todo
justiciable a exigir del órgano jurisdiccional a cargo del juzgamiento una resolución
debidamente fundamentada…" Entendimiento que también se plasmó, entre otras, en las SSCC
1369/2001-R, 0752/2002-R y 0112/2010-R y la SC 2536/2010-R).

Respecto a la motivación de las resoluciones que resuelven recursos, la SC 0577/2004-R de 15


de abril, ha señalado que: "Esta exigencia de fundamentar las decisiones, se torna aún más
relevante cuando el Juez o Tribunal debe resolver en apelación la impugnación de las
resoluciones pronunciadas por las autoridades de primera instancia; (…), es imprescindible
que dichas Resoluciones sean suficientemente motivadas y expongan con claridad las razones y
fundamentos legales que las sustentan y que permitan concluir, que la determinación sobre la
existencia o inexistencia del agravio sufrido fue el resultado de una correcta y objetiva
valoración de las pruebas, del mismo modo que se exige al apelante cumplir con la obligación
de fundamentar los agravios; por cuanto, en la medida en que las resoluciones contengan, los
fundamentos de hecho y de derecho, el demandado tendrá la certeza de que la decisión
adoptada es justa; por lo que no le esta permito a un Juez o Tribunal, reemplazar la
fundamentación por la relación de antecedentes, la mención de los requerimientos de las partes
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 863
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

o hacer alusión de que el Juez de instancia obró conforme a derecho, (…); con mayor razón, si
se tiene en cuenta que el contar con una Resolución debidamente fundamentada y motivada es
un derecho fundamental de la persona y forma parte del debido proceso".

De la jurisprudencia citada, se aprecia que la fundamentación y motivación de las resoluciones


judiciales no se traduce en una exigencia de extensión o simplemente de forma, sino que
esencialmente se refiere a aspectos de fondo referidos a que el juez, tribunal de decisión, como
tercero imparcial, debe expresar en su resolución los hechos, pruebas y normas en función de las
cuales adopta una determinación, pero además las razones (el por qué) valora los hechos y
pruebas de una manera determinada e interpreta y aplica las normas en un sentido u otro, pues
no hacerlo implica privar a las partes de conocer los motivos de la decisión judicial, aspecto que,
en el caso de Resoluciones recurribles, los deja en indefensión para impugnarlas y, en el de las
de carácter definitivo, además de aquello, les impide conocer si se ajustan o se apartan del orden
constitucional, lo que ciertamente vulnera sus derechos humanos y fundamentales.

Es preciso señalar que el debido proceso, del que es elemento componente la motivación y
congruencia de las resoluciones, se encuentra garantizado por el Estado en virtud al art. 115.II
de la CPE y de manera específica para el ámbito penal por el art. 117.I de la misma Norma
Fundamental.

III.3. Análisis del caso concreto

De los antecedentes del expediente se evidencia que la Aduana Nacional de Bolivia presentó
denuncia formal contra dos funcionarias por la supuesta comisión de los delitos de
incumplimiento de deberes y ejercicio indebido de la profesión; a consecuencia de ello:, 1) El 4
de agosto de 2008, el Fiscal de Materia demandado, emitió Resolución de sobreseimiento sin la
debida fundamentación, sin una compulsa correcta y responsable de los antecedentes y sin
considerar los contundentes documentos aportados; y, 2) Habiendo impugnado dicha
Resolución, la Fiscal de Distrito demandada convalidó la irresponsable Resolución de
Sobreseimiento y fundamento la ratificación en su propia falta e inobservancia de la prueba
encontrada como pendiente, vulnerando el debido proceso.

Respecto a la valoración de la prueba, en la que presuntamente habría incurrido el Fiscal de


Materia, según se ha precisado en el Fundamento Jurídico III.1 de esta Sentencia, la jurisdicción
constitucional solamente podrá ingresar al análisis de este aspecto cuando se evidencie una
lesión a derechos fundamentales porque existió apartamiento de los marcos legales de
razonabilidad y equidad previsibles para decidir o cuando se haya adoptado una conducta
omisiva expresada, entre otras, en no recibir, producir o compulsar cierta prueba inherente al
caso. A ese efecto, es imprescindible que el accionante demuestre que la resolución hubiera
podido ser distinta de haberse practicado la prueba omitida, o si se hubiese practicado
correctamente la admitida, lo que no ha ocurrido en autos.

Con relación a la denuncia de falta de fundamentación y motivación de la Resolución 673/08 de


8 de septiembre de 2008, pronunciada por la Fiscal de Distrito por la que ratifica el
sobreseimiento, es evidente por cuanto la citada autoridad se limitó a trascribir la Resolución de
sobreseimiento emitida por el Fiscal de Materia sin fundamentar la ratificatoria del mismo,
omisión que vulnera el derecho invocado por el accionante, pues conforme a lo señalado en el
Fundamento Jurídico III.2 del presente fallo toda resolución que se emita debe contener
imprescindiblemente los motivos de la decisión que se adopta lo que no ha sucedido con la
Resolución cuestionada en la cual la Fiscal demandada no expuso el porque ratificaba el
sobreseimiento - limitándose como se dijo a remitirse íntegramente a la resolución dictada por el
inferior; omisión que determina sobre este punto se otorgue la tutela solicitada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 864
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En la solicitud de amparo respecto de los supuestos derechos conculcados en lo tocante a la


seguridad jurídica, se aclara que el Tribunal Constitucional Plurinacional no tutela principios,
sino derechos y garantías previsto en la Constitución Política del Estado, por lo que a este
respecto no corresponde pronunciamiento.

De lo desarrollado precedentemente se concluye que el Tribunal de Garantías, al haber


concedido en parte la tutela, evaluó correctamente los datos del proceso y las normas aplicables
al presente caso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
APROBAR la Resolución 027/2011 de 19 de julio, cursante de fs. 158 a 160, pronunciada por
la Sala Civil Primera de la Corte Superior de Justicia del Distrito -ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de La Paz y en consecuencia CONCEDER en parte la tutela impetrada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0083/2012


Sucre, 16 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2005-11912-24-RAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 106/2005 de 21 de junio, cursante a fs. 195 a 197 vta., pronunciada
dentro del recurso de amparo constitucional -ahora acción de amparo constitucional-,
interpuesta por Marco Antonio Baldivieso Jinés en representación de la Asociación de
Magistrados y Jueces de Bolivia (AMABOL) contra Eduardo Rodríguez Veltzé, Presidente
de la Corte Suprema de Justicia y del Consejo de la Judicatura; y, María Teresa Rivero de
Cusicanqui, Guido Chávez Méndez, Rodolfo Mérida Rendón y José Luis Dabdoub López,
Consejeros de la Judicatura.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 18 de mayo de 2005, cursante de fs. 74 a 79, se tiene conocimiento
de los siguientes argumentos:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 865


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante por sus representados manifiesta que, pese a que por once años consecutivos
percibieron anualmente dos bonos completos denominados "Bono I y II", esto en razón a una
compensación pecuniaria obedeciendo a una justa restitución de sus derechos sociales, puesto
que llevan bajo su investidura la enorme responsabilidad de impartir justicia, además de una
dedicación constante en el trabajo cotidiano en el despacho de causas, sin dejar de lado la
obligación de actualizarse constantemente y acudir a capacitarse a diferentes eventos
académicos para cualificar sus conocimientos y mejorar su tarea jurisdiccional, constituyendo un
merecido y justo reconocimiento a su esfuerzo y la dedicación exclusiva, aspecto previsto por
los arts. 116 de la Constitución Política del Estado abrogada (CPEabrg); y, 3, 6 al 12 de la Ley
de Organización Judicial (LOJ.1993), debiendo tomarse en cuenta además las prohibiciones e
incompatibilidades a las cuales están sujetos, viéndose en la obligación de dedicarse
exclusivamente a sus tareas jurisdiccionales, encontrándose apartados de toda actividad pública
y privada que pueda permitirles obtener ingresos suplementarios; sin embargo, las autoridades
demandadas no cancelaron en su totalidad el Bono II correspondiente a la gestión 2004; es
decir, el 100% del mismo.

Refiere que, las autoridades demandadas no tomaron en cuenta los extremos mencionados en el
párrafo precedente, pese a que realizaron constantes reclamos, haciéndoles notar la ilegal
restricción del derecho adquirido a la remuneración justa y al pago equitativo por trabajo igual,
mereciendo como respuesta desfavorable de su Secretario General, aduciendo razones de orden
presupuestario.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, estima vulnerados los derechos de sus representados a la "seguridad jurídica", a


percibir una remuneración justa y al debido proceso, citando al efecto los arts. 7 incs. a) y j);
16.IV, 157 y 162 de la CPEabrg; y, 7 del Pacto Internacional de Derechos Económicos Sociales
y Culturales.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare "procedente" el "recurso" de amparo constitucional, ordenándose al Consejo


de la Judicatura disponga el pago inmediato del 50% restante del Bono II correspondiente a la
gestión 2004.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 21 de junio de 2005, según consta en el acta cursante de fs.
190 a 194 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante por sus representados reiteró el contenido del memorial de la acción de amparo
constitucional y ampliándolo señaló que, el Bono II de la gestión 2004 a principio de año, luego
de la respectiva planificación del presupuesto, ya se encontraba previsto y dispuesto su pago
total; sin embargo, una decisión unilateral del Pleno del Consejo de la Judicatura decidió pagar
únicamente el 50% de dicho bono.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 866


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Los abogados y apoderados de las autoridades demandadas, mediante informe escrito cursante
de fs. 152 a 155 vta., así como en audiencia manifestaron: 1) Se debe dejar claramente
establecido que los denominados bonos constituyen incentivos funcionales, tal como lo prevé el
art. 57 del Reglamento Específico de Administración en concordancia con lo dispuesto por las
Normas Básicas del Sistema de Administración Personal, cuyas características son anuales y su
dependencia de la existencia de recursos, lo que en el Poder Judicial está reatado a los ingresos
que se tenga por recursos propios constituidos por multas procesales, costas, valores judiciales,
aranceles notariales y registro de Derechos Reales (DD.RR.), por lo que de acuerdo con las
disposiciones contenidas en las directrices de ejecución presupuestaria deben hallarse inscritas
en el presupuesto de la entidad, en una partida totalmente diferente a la de sueldos y salarios; 2)
Las asignaciones presupuestarias de gasto aprobadas cada año, tal como lo establece el art. 4 de
la Ley de Administración Presupuestaria, constituyen límites máximos de gasto y su ejecución
estará sujeta a los procedimientos legales que en cada partida sean aplicables, por lo que la
asignación presupuestaria inscrita en cualquiera de las partidas del presupuesto presentada para
su aprobación ante el Congreso Nacional, no significa la existencia real y física de ese monto de
dinero para ser ejecutado, pudiendo dicho monto asignado ser modificado y su ejecución sea de
acuerdo a la disponibilidad financiera; 3) Los ingresos del Poder Judicial son provenientes del
Tesoro General de la Nación (TGN) y de recursos propios, asignándose los primeros a cubrir
una parte de los sueldos y salarios, en tanto que los segundos a gastos de funcionamiento, de
inversión y para cubrir la parte faltante de los haberes, teniéndose la partida 11330 para el pago
de bonificaciones a los funcionarios del mismo, bonos que son emolumentos extraordinarios
concedidos en función de la proyección y captación de los recursos propios, por lo que los
bonos no son derechos adquiridos, ya que constituyen meras expectativas, ejecutables
cuando se hallan consignados en el presupuesto y cuentan con el efectivo necesario; 4) El
Plenario del Consejo de la Judicatura mediante Acuerdo 299/2004 de 26 de octubre, autorizó el
pago del Bono Complementario II en la proporción del 50%, fundamentando que el presupuesto
General de la Nación para la gestión 2004, si bien se encontraba prevista en el partida 11330 del
grupo 10000 de "Servicios Personales" del presupuesto del Poder Judicial, dicha previsión sería
con cargo a recursos propios, señalando además que, se debía ejecutar el presupuesto atendiendo
las limitaciones financieras que en ese caso no les permitían pagar el referido Bono en su
totalidad, puesto que el presupuesto asignado a la partida mencionada era de Bs28 000 000.- (
veintiocho millones de bolivianos), que por motivos de austeridad y de acuerdo con lo dispuesto
por el Gobierno Central y teniendo en cuenta las necesidades del propio Poder Judicial, fue
modificado asignándose un monto de Bs25 248 166.- (veinticinco millones doscientos cuarenta
y ocho mil ciento sesenta y seis bolivianos), monto del cual se utilizaron Bs16 717 127,10.- (
dieciséis millones setecientos diecisiete mil ciento veintisiete 10/100 bolivianos) para la
cancelación del Bono I denominado "Pantaleón Dalence" y por el 50% del Bono II se pagó la
suma de Bs8 330 124,03.- (ocho millones trescientos treinta mil ciento veinticuatro 03/100
bolivianos), haciendo una suma total de ejecución presupuestaria de Bs25 047 251,13.-
(veinticinco millones cuarenta y siete mil doscientos cincuenta y uno 13/100 bolivianos), por lo
que el presupuesto asignado para la partida 11330 denominado "otras bonificaciones" fue
ejecutado casi en su totalidad, pues no existía posibilidad legal ni financiera para cancelar
el total del Bono II; 5) Existe una total falta de coherencia entre lo reclamado y lo que piden
como tutela jurídica en el memorial del presente "recurso", puesto que reclaman la supresión del
Bono II en la gestión 2005 y contradictoriamente piden el pago del 50% del Bono II de la
gestión 2004; 6) Se debe tomar en cuenta que José Luis Dabdoub López y Rodolfo Mérida
Rendón no participaron ni firmaron el Acuerdo 299/2004, debido a que asumieron sus funciones
el 3 de enero de 2005, por lo que existe falta de legitimación pasiva, pues no existe coincidencia
entre la autoridad que presuntamente causó la violación de derechos y aquellas contra quien se
dirige la acción; 7) La cancelación de los Bonos I y II, ha estado delimitado por una norma
interna cual es un Acuerdo del Pleno del Consejo de la Judicatura y antes por un Acuerdo del
Consejo de Administración de la Corte Suprema de Justicia, disposiciones internas que son
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 867
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

respaldadas por la aprobación del presupuesto efectuada por el Ministerio de Hacienda, no


estando fijado o establecidos en ninguna ley o norma; 8) Existe una aceptación expresa por
parte de los "recurrentes" sobre el porcentaje pagado, ello demostrado al haber cobrado el
mismo, por lo que consintieron libre y expresamente el acto administrativo efectuado en el
Acuerdo 299/2004; 9) Dictado el Acuerdo 299/2004, conforme a los arts. 64 y 66 de la Ley de
Procedimiento Administrativo (LPA), los "recurrentes" tenían el plazo de diez días para plantear
los recursos de revocatoria y jerárquico, lo que no aconteció en ninguna de sus notas o misivas,
por lo que conforme lo establece la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre, debe declararse la
"improcedencia" de la acción de amparo planteada; y, 10) Precluyó y caducó los derechos de los
"recurrentes" a hacer uso del amparo constitucional, debiendo tomarse en cuenta que desde el 26
de octubre de 2004, que fue dictado el Acuerdo 299/2004, han transcurrido hasta la fecha de la
presentación de este "recurso" más de los seis meses determinados como regla de inmediatez.

I.2.3. Resolución

Los Conjueces convocados por la Sala Penal Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial
de Chuquisaca -ahora Tribunal Departamental de Justicia- constituida en Tribunal de garantías,
por Resolución 106/2005 de 21 de junio, cursante de fs. 195 a 197 vta., declaro "procedente" el
"recurso" interpuesto, disponiendo en merito al art. 102.I de la Ley del Tribunal Constitucional
(LTC), el pago inmediato de dicho Bono, conforme se tenía presupuestado en el Presupuesto
Operativo Anual (POA) de la gestión 2004, en base a los siguientes fundamentos: a) Al
constatar la aprobación del presupuesto para el Poder Judicial de la gestión 2004, los derechos
emergentes referidos al pago de salarios y bonos, son derechos adquiridos por los trabajadores
que gozan de la protección del art. 162.II de la CPE; b) No se puede justificar el no pago del
50% del Bono II de la gestión 2004, por una reducción presupuestaria a mitad de gestión, lo que
llevó a tomar la decisión al Pleno del Consejo de la Judicatura mediante el Acuerdo 299/2004, lo
que implica contravenir lo dispuesto por el art. 162.II de la Norma Fundamental; c) Se evidenció
que la AMABOL en diferentes oportunidades reclamó ante la instancia pertinente el pago del
50% del Bono II de la gestión 2004 y que incluso se mantuvieron reuniones con el Pleno del
Consejo de la Judicatura, sin tener respuesta favorable alguna, solamente negativas suscrita por
el Secretario del Plenario; d) De la revisión de la prueba aportada, se evidenció que José Luis
Dabdoub y Rodolfo Mérida Rendón, Consejeros de la Judicatura, participaron de la reunión del
Plenario con representantes de la AMABOL, el 1 de febrero de 2005, a los que hicieron conocer
la decisión de no poder cumplir el pago restante del 50% del Bono II, debido a la falta de
recursos económicos y a la necesidad de equilibrar el presupuesto de la gestión 2005 en función
de los ingresos disponibles, convalidando con su presencia y suscripción de firmas el
incumplimiento de la ejecución presupuestaria aprobada para la gestión 2004, por lo que no
existe falta de legitimación pasiva; e) Respecto a la subsidiariedad se tiene que la AMABOL ha
demostrado los constantes reclamos realizados ante el Consejo de la Judicatura, no existiendo
respuesta favorable a los mismos; y, f) En cuanto a la inmediatez del "recurso" resulta que la
última actuación es de 20 de abril de 2005, lo que determina encontrarse dentro del plazo
establecido por ley.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Se procedió al sorteo de la presente causa el 28 de febrero de 2012, por lo que la Resolución es


pronunciada dentro de plazo; dejando constancia que la Magistrada, Dra. Blanca Isabel Alarcón
Yampasi, presentó excusa, la cual fue declarada legal mediante AC 0007/2012-CA/S-L de 23 de
marzo.

I.4. Consideraciones de Sala

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 868


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo
siguiente:

II.1. Por Acuerdo 299/2004, suscrito por Eduardo Rodríguez Veltzé, Presidente de la Corte
Suprema de Justicia y del Consejo de la Judicatura; y, María Teresa Rivero de Cusicanqui,
Guido Chávez Méndez, Germán Gutiérrez Gantier, Ricardo Pol Achá, Consejeros de la
Judicatura, autorizaron a la "Gerencia Administrativa y Financiera del Consejo de la Judicatura,
ejecutar la Partida 11330 del grupo 10000 del Presupuesto aprobado del Poder Judicial,
procediendo al pago del Bono Complementario II, en la proporción del 50% del total ganado
mensual a todos los funcionario judiciales…" (sic) (fs. 156 y 157).

II.2. Mediante nota presentada el 6 de enero de 2005, dirigida a Eduardo Rodríguez Veltzé,
Presidente de la Corte Suprema de Justicia y del Consejo de la Judicatura; y, "María Teresa
Cusicanqui de Rivero", Guido Chávez Méndez, Rodolfo Mérida Rendón y José Luis Dabdoub
López, Consejeros de la Judicatura, AMABOL entre otros solicito la "cancelación del restante
50 por ciento del bono II" (sic); señalando además que: "…si bien hemos aceptado este pago
en fracciones, fue precisamente debido a la falta de disponibilidad en el momento…" (las
negrillas fueron añadidas) (fs. 38 y 39).

II.3. Los representantes de la AMABOL, por nota presentada el 11 de marzo de 2005, dirigida a
Eduardo Rodríguez Veltzé, Presidente de la Corte Suprema de Justicia y del Consejo de la
Judicatura; y, María Teresa Rivero de Cusicanqui, Guido Chávez Méndez, Rodolfo Mérida
Rendón y José Luis Dabdoub, Consejeros de la Judicatura, reiteraron la solicitud de la
cancelación del Bono II correspondiente a la gestión 2004, a favor de todos los funcionarios que
comprende el Poder Judicial (fs. 64 y vta.).

II.4. José Hurtado Poveda, Secretario General del Pleno del Consejo de la Judicatura, mediante
notas SP-CJ 0115/05 de 19 de enero de 2005 y 0582/2005 SP/CJ de 6 de abril, informó al
Presidente de la AMABOL, René Fernández Ordóñez, que en función a informes técnicos sobre
la cancelación del 50% del Bono II correspondiente a la gestión 2004, el Plenario tomó la
determinación de no hacer efectiva la cancelación del saldo reclamado, por razones
estrictamente presupuestarias y financieras (fs. 63 y 165).

II.5. El 1 de febrero de 2005, el Plenario del Consejo de la Judicatura se reunió entre otros con
los representantes de la AMABOL para tratar el pago del 50% del Bono II de la gestión 2004, al
respecto los Consejeros explicaron que no se podía honrar dicha cancelación restante del Bono
II, debido a falta de recursos económicos y la necesidad de equilibrar el presupuesto de la
gestión 2005, esto en función a los ingresos disponibles y los requerimientos de diversa índole
(fs. 171 a 177 vta.).

II.6. El 25 de octubre de 2005, en reunión ampliada entre las autoridades administrativas del
Poder Judicial y los representantes de la AMABOL, mediante consenso llegaron al "Convenio
de Entendimiento" respecto a la cancelación total del Bono Complementario II de las gestiones
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 869
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

2004 y 2005 (fs. 234); por lo que el Plenario del Consejo de la Judicatura, mediante Acuerdo
310/2005 de 22 de noviembre, autoriza a la Gerencia General de dicha institución, para que
remita al Tribunal Constitucional el Convenio de Entendimiento referido, documento que hizo
viable el pago del Bono Complementario II de la gestión 2004, a los funcionarios del Poder
Judicial, para efectos legales posteriores (fs. 235 y 236); sin embargo, Marco Antonio
Baldivieso Jinés, en representación de AMABOL, señaló que el citado "Convenio de
Entendimiento", si bien se encontraba suscrito por su Presidente y Secretario, éstos no se
encontraban facultados para proceder y representar a AMABOL, debiéndose tomar en cuenta
que dicho documento no se encontraba aprobado por la mayoría de los miembros de AMABOL,
no contando con el desistimiento de todos sus poderconferentes (fs. 245 y 246 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de los derechos de sus representados a la "seguridad jurídica",


a percibir una remuneración justa y al debido proceso, debido a que las autoridades demandadas,
omitieron la cancelación del 100% del Bono Complementario II correspondiente a la
gestión 2004, a favor de todos los funcionarios del Poder Judicial, pese a estar previamente
presupuestado y olvidándose que los Bonos I y II son derechos adquiridos, percibidos
anualmente de manera completa desde hace más de once años. En consecuencia, corresponde en
revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1.La acción de amparo constitucional: Naturaleza y finalidad

Al respecto, conforme a la amplia jurisprudencia sentada por el Tribunal Constitucional, la


acción de amparo constitucional es una garantía jurisdiccional extraordinaria que protege los
derechos y garantías constitucionales consagrados por la Norma Fundamental, cuando éstos sean
restringidos, suprimidos y/o amenazados de restricción y supresión por particulares o
funcionarios públicos, tal cual lo establece el art. 128 de la CPE.

Así también debe tomarse en cuenta que, esta acción tutelar prosperará siempre y cuando no
existan otros medios y/o mecanismos de protección a esos derechos y garantías, lo que hace a su
naturaleza subsidiaria, puesto que no es un instrumento alternativo o sustitutivo de las acciones
ordinarias que la Constitución Política del Estado y las leyes asignan a las distintas
jurisdicciones, debiendo observarse para su presentación, que ésta debe efectivizarse dentro del
plazo de seis meses computables a partir de la vulneración alegada o de la notificación con la
última resolución administrativa o judicial, aspectos previstos por el art. 129 de la CPE.

III.2.Los actos consentidos no son objeto de tutela dentro de una acción de amparo
constitucional

Sobre este tema, la Ley del Tribunal Constitucional en su art. 96.2, estableció como causal de
improcedencia de la acción de amparo constitucional los actos consentidos, al señalar: "Cuando
se hubiere interpuesto anteriormente un recurso constitucional con identidad de sujeto, objeto y
causa y contra los actos consentidos libre y expresamente o cuando hubieren cesado los
efectos del acto reclamado" (las negrillas añadidas). En ese sentido, este Tribunal asume el
razonamiento expresado en la SC 0231/2010-R de 31 de mayo, por no ser contraria al orden
constitucional vigente, misma que a su vez cita la SC 1667/2004-R de 14 de octubre, al respecto
estableció: "…debe entenderse objetivamente como cualquier acto o acción que el titular del
derecho fundamental realice ante la autoridad o particular que supuestamente lesionó el
mismo, como también ante otra instancia, dejando advertir o establecer claramente que acepta
o consiente de manera voluntaria y expresa la amenaza, restricción o supresión a sus derechos
y garantías fundamentales, de modo que no siempre podrá exigirse un acto en el que el titular
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 870
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

manifieste textualmente y por escrito que acepta libre y expresamente el acto ilegal u omisión
indebida, sino que ello podrá deducirse con los elementos de juicio suficientes del accionar que
el titular hubiera tenido a partir de la supuesta lesión de la que hubiesen sido objeto sus
derechos y garantías constitucionales" (las negrillas son nuestras).

Así también al respecto, la SC 0906/2010-R de 10 de agosto, señaló: "En otras palabras, más
allá de formalismos, son los hechos y la actitud de la persona supuestamente agraviada la que
en definitiva conducen a determinar si hubo acto consentido o no, en ese caso aunque no
haya una expresión expresa en ese sentido, tiene el mismo efecto del consentimiento tácito,
pero reflejado en actos expresos y libres de sometimiento a los efectos del acto, decisión o
resolución que se impugna de ilegal; lo cual resulta un contrasentido, dado que si hay
sometimiento voluntario palpable o demostrable, no puede posteriormente tachar de
ilegalidad a lo que se ha sometido, puesto que la jurisdicción constitucional no está sujeta a la
desidia de las partes, quienes pese a tener en su momento el derecho y la posibilidad de
interponer la acción de amparo constitucional de manera inmediata con un procedimiento y
tutela también inmediata y efectiva, no lo hicieron, y es más, lo cumplieron; o luego de haber
activado la acción de amparo constitucional, de manera paralela se sometieron a los efectos de
la Resolución impugnada, pese a estar en trámite la acción de amparo constitucional" (las
negrillas nos pertenecen).

En ese sentido, el Tribunal Constitucional, concluyó que: "…para declarar la improcedencia de


un recurso de amparo constitucional por esa causal, no es suficiente una actuación implícita,
dado que el consentimiento expreso importa un acto positivo, concreto, libre e inequívoco,
vinculado de manera directa a la actuación ilegal impugnada; en otras palabras, la
manifestación de la voluntad debe demostrar, de manera indubitable, el consentimiento a la
amenaza o lesión a algún derecho fundamental.

Consecuentemente, para que produzcan las consecuencias jurídicas expresadas en el art. 96.2
de la LTC, los actos deben provocar en el Tribunal la convicción plena de que el accionante
está de acuerdo con el acto reclamado; dado que la simple presunción del consentimiento por
acciones que no están directamente relacionadas con el supuesto acto ilegal, lesionaría la
garantía de la tutela jurisdiccional eficaz…" (SC 0537/2011-R de 29 de abril) (las negrillas nos
corresponden).

III.3. Análisis del caso en revisión

El accionante por sus representados interpone la presente acción tutelar, alegando vulneración a
sus derechos constitucionales, señalando que las autoridades demandadas omitieron la
cancelación total del Bono Complementario II correspondiente a la gestión 2004, mismo que se
encontraba presupuestado, llegando a constituirse como un derecho adquirido a su favor, el cual
se pagaba desde hace once años, por lo que solicita la cancelación del saldo correspondiente.

Del estudio de los antecedentes y de la documental adjunta a la presente acción de amparo


constitucional se tiene evidencia que, mediante Acuerdo 299/2004, el Plenario del Consejo de la
Judicatura, acordó y autorizó a la Gerencia Administrativa y Financiera de dicha institución,
"ejecutar la Partida 11330 del grupo 10000 del Presupuesto aprobado del Poder Judicial,
procediendo al pago del BONO COMPLEMENTARIO II, en la proporción del 50% del total
ganado mensual a todos los funcionarios judiciales…" (sic) (fs. 156 y 157); sin embargo, no es
menos evidente que, a partir de la nota presentada el 6 de enero de 2005, dirigida a las
autoridades codemandadas, los representantes de la AMABOL-entre otros puntos- dejaron
constancia que: "…si bien hemos aceptado este pago en fracciones, fue precisamente debido a
la falta de disponibilidad en el momento…" (negrillas añadidas) (fs. 38 y 39), e incluso existió
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 871
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

otra actuación de parte de los representantes del accionante en la cual plasmaron su aceptación
demostrada acerca del porcentaje cancelado del Bono que nos ocupa, puesto que efectuaron el
cobro del mismo, sin manifestarse sobre el acto ilegal que hoy denuncian a través de esta acción
tutelar, sino hasta el 6 de enero de 2005, meses después y en otra gestión, mediante la nota
enviada a los hoy demandados, la misma que fue ya mencionada (fs. 38 y 39), actos a partir de
los cuales se tiene constancia que se exteriorizó de manera libre su consentimiento sobre la
omisión indebida denunciada mediante la acción tutelar que nos ocupa, convalidando con
ello el Acuerdo citado precedentemente, instrumento con el que se dio origen al supuesto acto
ilegal manifestado, aspectos que se enmarcan dentro de lo establecido por la jurisprudencia
constitucional citada en el Fundamento Jurídico III.2 de esta Sentencia, por lo que no es posible
ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada correspondiendo la denegatoria de la
tutela pretendida.

III.4.Necesidad de modular los efectos de la presente Sentencia Constitucional


Plurinacional respecto al caso analizado

Tal cual lo establece el art. 48.4 de la LTC, las sentencias constitucionales emitidas por este
Tribunal Constitucional Plurinacional pueden ser moduladas en sus efectos, señalando en: "La
parte resolutiva en la que se pronunciará el fallo sobre el fondo del recurso o demanda, en la
forma prevista para cada caso, su dimensionamiento en el tiempo y los efectos sobre lo
resuelto…", en ese sentido, se ha llegado a establecer que la acción de amparo constitucional fue
presentada pese a haberse manifestado de manera expresa el consentimiento de los
representantes del accionante, toda vez que aceptaron la cancelación del Bono Complementario
II correspondiente a la gestión 2004, tal cual se evidencia en obrados (fs. 38 y 39); empero, este
Tribunal no puede desconocer todos aquellos actos que como emergencia de haberse concedido
la tutela solicitada se hubieran realizado, mas aún tomándose en cuenta que a partir de la
interposición de la presente acción constitucional transcurrieron más de seis años.

Por lo expresado precedentemente, la situación planteada no se encuentra dentro las previsiones


y alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías, al haber
concedido la tutela, no efectuó una correcta compulsa de los antecedentes procesales, ni aplicó
adecuadamente los alcances de esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en virtud de la jurisdicción y competencia que le


confiere el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011, en revisión, resuelve:

1º REVOCAR la Resolución 106/2005 de 21 de junio, cursante de fs. 195 a 197 vta., dictada
por Conjueces de la Sala Penal Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora
Tribunal Departamental de Justicia- de Chuquisaca; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada, con la aclaración de que no se ingresó al análisis de fondo de la problemática
planteada.

2º Al amparo del art. 48.4 de la LTC, debido al tiempo transcurrido desde la interposición de la
acción tutelar hasta la presente revisión, conforme a lo referido en el Fundamento Jurídico III.4
de esta Sentencia, se dimensionan los efectos de la misma, dejando subsistentes los actos
cumplidos como resultado de la concesión de tutela por el Tribunal de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

No interviene la Magistrada, Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi, por excusa declarada legal.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 872
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fdo. Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.


Dra. Carmen Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0091/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-19531-40-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 014/2009 de 23 de marzo, cursante de fs. 774 a 779, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Freddy Ortega Vásquez contra
Edmundo Nogales Flores, Edgar Revilla Viveros, Félix Molina Oblitas, Jorge Antonio
Saravia, Iver Antonio Márquez Vacaflor y Miguel Gemio Urrutia, ex Presidente a.i y ex
Vocales respectivamente del Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Nacional; Víctor
Hugo Escobar Guzmán, René Sanabria Oropeza, Juan Oscar Torrico Amellier, Pablo
Caballero Gonzáles, Francisco Campero Villarroel y Ramiro Fernando Valdivia García,
actual Presidente y Vocales del mismo Tribunal.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memoriales presentados el 26 de febrero de 2009, cursante de fs. 353 a 361 vta.; de
subsanación de 6 de marzo del año citado (fs. 371 a 375) y ampliatorio del mismo mes y año
precitados (fs. 685 y vta.); el accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 17 de diciembre de 2004, de oficio y previo reporte del Grupo Especial de Seguridad (GES),
se le inició un proceso de investigación por la supuesta comisión de la falta de deserción,
tipificada en el art. 6, inc. "D", numeral 25 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y Sanciones
de la Policía Nacional, con el argumento que hubiese faltado al servicio el 2, 3, 4 y 5 de
diciembre del referido año. Es así que el 11 de febrero de 2005, el Fiscal Policial de la Dirección
Nacional de Responsabilidad Profesional, emitió requerimiento para que se acumule a las
investigaciones, otro proceso investigativo que se abrió de oficio también en su contra, por las
supuestas faltas a su servicio del 2 al 9 de enero de 2005.

Concluida la investigación por los dos casos, el 17 de diciembre de "2004", el Fiscal Policial
presentó acusación en su contra por la supuesta comisión de la falta grave de deserción,
señalando que habría faltado sin justificación alguna a su fuente de trabajo, en base a la cual, el
8 de mayo de 2006, el Tribunal Departamental de la Policía Nacional, dictó el Auto Inicial del
proceso, sometiéndolo a proceso disciplinario, oral, público y contradictorio el 6 de septiembre
del indicado año, que concluyó con la emisión de la Resolución 84/2007 de 21 de septiembre,
sancionándolo con baja definitiva de la institución policial, sin derecho a reincorporación;
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 873
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Resolución contra la cual, interpuso recurso de apelación y nulidad absoluta por defectos
insubsanables que fue resuelto por el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Nacional,
mediante Resolución 23/2008 de 7 de marzo, declarando probada la apelación y anulando
obrados.

Agrega que, una vez que el Tribunal Disciplinario Departamental, señaló día y hora de sorteo de
Vocales y audiencia de juicio oral, público y contradictorio, el 12 de mayo de 2008, planteó la
excepción de prescripción, solicitando se declare extinguida la acción disciplinaria. Asimismo,
el "13" del mismo mes y año, interpuso incidente de nulidad por actividad procesal defectuosa,
que fue declarado improbado, con el argumento que la prescripción no opera porque la
notificación con el Auto Inicial del proceso, interrumpe la prescripción y que si bien existe un
vicio de nulidad absoluto, según la SC 0225/2005-R de 14 de marzo, su derecho precluyó,
puesto que debió interponer a través de una impugnación del requerimiento acusatorio, por lo
que se reservó el derecho de apelación.

Sustanciado el proceso con la producción de pruebas de cargo y de descargo, el 14 de mayo de


2008, el Tribunal Disciplinario Departamental, emitió la Resolución 063/08 de 16 mayo de
2008, sosteniendo que hubiese faltado a su servicio del 2 al 5 de diciembre de 2004 y desde el 2
al 9 de enero de 2005, sin razón justificada; pero arbitrariamente, no tomaron en cuenta la baja
médica emitida por la Caja Nacional de Salud, que justifica su ausencia por enfermedad los días
2 y 3 de diciembre, ni tampoco consideraron que los siguientes días 4 y 5 le correspondía su
descanso. Tampoco se percataron que en enero de 2005, se encontraba enfermo, tal como se
estableció en el informe final del Investigador asignado al caso, que confirmó la presentación de
la baja médica y la constatación de su estado de salud efectuado por la Trabajadora Social;
extremos que no fueron valorados por el Tribunal Disciplinario.

Contra la Resolución 063/08, dictada en primera instancia, interpuso recurso de apelación,


radicándose el mismo en el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Nacional; instancia en
la que hizo conocer que la Resolución apelada presentaba defectos absolutos que vulneraban sus
derechos y garantías constitucionales, porque se prosiguió el juicio a pesar de haber demostrado
que se acumularon dos procesos diferentes en uno mismo, con un simple requerimiento de
conexitud, además que las faltas que se le atribuyeron fueron justificadas en su oportunidad y
que la facultad para procesarlo había precluído, conforme establece el art. 133 del Reglamento
de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional, las faltas contempladas en el art.
6 inc. "D" numerales 1 al 29, prescriben a los veinticuatro meses de cometida; sin embargo,
dicho Tribunal mediante Resolución 405/2008 de 19 de agosto, declaró improbada la apelación,
sancionándolo con baja definitiva de la institución, sin derecho a reincorporación, argumentando
que el proceso comienza con el Auto Inicial del Proceso y por tanto no opera la prescripción,
que los defectos absolutos debieron reclamarse oportunamente y que si bien el Fiscal introdujo
pruebas no ofrecidas, pero en la misma audiencia las corrigió en la numeración, por lo que
fueron introducidas a juicio de acuerdo a las normas procesales; sin embargo, las pruebas de
descargo que presentó no fueron valoradas por el Tribunal Departamental ni fundamentadas en
la Resolución final, siendo evidente la vulneración de sus derechos.

I.1.2. Garantía supuestamente vulnerada

El accionante denuncia la vulneración de la garantía al debido proceso, sin citar precepto


constitucional alguno.

I.1.3. Petitorio

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 874


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Solicita se conceda la acción de amparo constitucional y se ordene a las autoridades demandadas


reparen sus derechos y por consiguiente se anulen las Resoluciones 405/2008 y 768/08 de 25 de
diciembre de 2008, resolviendo la prescripción de acuerdo a los parámetros establecidos por el
art. 133 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional,
extinguiendo el proceso y restableciendo sus derechos institucionales.

I.2.Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 23 de marzo de 2009, según consta en acta cursante de fs. 770
a 773 vta., de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La abogada del accionante ratificó in extenso los términos de la acción presentada, y reiteró los
fundamentos expuestos en él.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El abogado y apoderado de las autoridades demandadas, por informe escrito cursante de fs. 765
a 769 vta., leído en audiencia señaló: a) En el proceso interno seguido contra el accionante, se
respetaron sus derechos y garantías constitucionales, siendo evidente que en la etapa
investigativa el Fiscal Policial acumuló el caso 067/05 por conexitud con el caso 952/04 por
identidad, al tratarse del mismo sujeto procesal y de la misma falta grave disciplinaria de
deserción, medida que fue adoptada con las facultades conferidas por los arts. 52 del
Reglamento Disciplinario, 10 y 11 del manual de Funciones de la Dirección Nacional de
Responsabilidad Profesional y en conocimiento del accionante, quien fue legalmente notificado
para prestar su declaración informativa y en dicho acto estuvo asistido de su abogado,
oportunidad en la que no efectuó reclamo alguno, aceptando y dando por bien hecha la
acumulación de los dos procesos, hasta que dentro del juicio planteó excepción por actividad
procesal defectuosa con argumentos basados en normas penales y no así de acuerdo al
procedimiento disciplinario policial, por lo que el Tribunal Disciplinario Departamental de La
Paz, dentro del marco legal declaró improbado el incidente; b) Respecto a la prescripción del
proceso que solicitó el accionante, el Tribunal a quo emitió el Auto inicial el 8 de mayo de 2006,
notificándose con ese actuado al accionante el 16 de junio de 2006, con lo cual se interrumpió la
prescripción; c) Las bajas médicas que presentó el accionante, de acuerdo al certificado emitido
por el Director del Policlínico Central de la Caja Nacional de Salud, no registra ni tiene historial
clínico, además recién se aseguró el 23 de febrero de 2007; consiguientemente, el Tribunal
Disciplinario Superior de la Policía Nacional, con plena jurisdicción y competencia confirmó la
Resolución de primera instancia, resolviendo cada uno de los puntos apelados; y, d) La presente
acción tutelar fue presentada en forma extemporánea, puesto que con la Resolución 405/2008,
emitida por el Tribunal Disciplinario Superior, el accionante se dio por notificado el 27 de
agosto de 2008, consiguientemente no cumplió el plazo de la inmediatez.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Cuarta de la Corte Superior del Distrito Judicial, ahora Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 014/2009 de 23
de marzo, cursante de fs. 774 a 779, por la que concedió la tutela solicitada, sin costas ni
responsabilidad, disponiendo: 1) La nulidad de la Resolución 768/08; 2) La nulidad de la
Resolución del Tribunal Disciplinario Superior Permanente de la Policía Nacional 405/2008; y,
3) En el plazo de diez días a partir de la legal notificación, se dicte nueva Resolución
considerando el incidente sobre actividad procesal defectuosa, referente a la actuación del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 875
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fiscal; el análisis de la prescripción tomando en cuenta la doctrina del Tribunal Constitucional y


la consideración de las pruebas presentadas por el accionante; con los siguientes fundamentos: i)
No era facultad del Fiscal Policial arrimar los casos por conexitud, pues su labor radica en la
obligación principal de investigar los hechos que sean denunciados y no le está permitido dictar
resoluciones que corresponden a los Tribunales disciplinarios y aunque se trate de la misma
persona, de la misma falta no existe conexitud por tratarse de hechos producidos en dos
momentos diferentes; sin embargo, el requerimiento que dispuso la acumulación de los
procesos, no le fue notificado al accionante, quien fue convocado directamente para prestar su
declaración informativa; ii) Se verificó que existen pruebas presentadas por el accionante, que
no fueron analizadas por las autoridades demandadas; y, iii) Con relación a la prescripción
establecida en el art. 133 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía
Nacional, para el caso de deserción establece el plazo de veinticuatro meses de cometida la falta,
se observa que con el Auto inicial del proceso se notificó al accionante el 16 de junio de 2006,
habiendo trascurrido ese plazo sin que se hubiese dictado resolución final, por lo que con la
Resolución 405/2008, emitida por el Tribunal Disciplinario Superior Permanente, se vulneraron
los derechos de la "seguridad jurídica" y la garantía del debido proceso; sin embargo, no se
advierte que se hubiera vulnerado el derecho a la defensa, en razón a que el accionante hizo uso
de todos los recursos, incidentes y medios que creyó pertinentes.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art.20.I y II de la ley de 212 de 23 de diciembre de
2011; la sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformo la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los magistrados de la misma, el15 de febrero de 2012, a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas al os Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre del 2011, en el marco de la ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro el plazo.

II. CONCLUSIONES

II.1. El 17 de diciembre de 2004, en la Dirección Nacional de Responsabilidad Profesional, se


inició investigación contra Freddy Ortega Vásquez, hoy accionante, por inasistencia
injustificada al servicio los días 2, 3, 4, y 5 de diciembre de 2004, asignándose al caso, el
número 952/04, a cuyo efecto adjuntaron los informes correspondientes, emitiendo el
investigador asignado al caso, la citación para que preste su declaración informativa
acompañado de su abogado. Asimismo, el 18 de enero de 2005, se inició otra investigación
contra el accionante, por inasistencia injustificada a sus funciones desde el 2 hasta el 9 de enero
de ese año, en mérito a lo cual, por Requerimiento de 11 de febrero de 2005, el Fiscal Policial de
la Dirección Nacional de Responsabilidad Profesional, requirió que el caso 067/05,
correspondiente a la segunda investigación, sea arrimado al caso 952/04, con el argumento de
tratarse del mismo autor y de las mismas faltas (fs. 1 a 24).

II.2. En mérito al informe en conclusiones elaborado por el investigador asignado al caso, el 27


de junio de 2005, el Fiscal Policial de la Dirección Nacional de Responsabilidad Profesional,
presentó denuncia contra el accionante por la falta grave de deserción, en base a la cual, el
Presidente del Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz, dictó el Auto inicial
del proceso disciplinario de 8 de mayo de 2006, por la supuesta transgresión del art. 6 inc. "D"
numeral 25 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional,
disponiendo que se programe la audiencia de sorteo de vocales y audiencia de proceso oral,
notificándose al accionante el 16 de junio del indicado año (fs. 46 a 63 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 876


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

II.3. Tramitado el juicio oral, público y contradictorio, el Tribunal Disciplinario Departamental


Permanente de La Paz, dictó la Resolución Administrativa 084/2007, sancionando a Freddy
Ortega Vásquez, con baja definitiva de la institución policial, sin derecho a reincorporación, por
la comisión de la falta disciplinaria prevista en el art. 6 inc. "D" numeral 25 del Reglamento de
Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional (fs. 106 a 108 vta.).

II.4. A través del memorial de 26 de septiembre de 2007, el accionante interpuso recurso de


apelación contra la Resolución 084/2007, alegando la inobservancia y aplicación errónea del
Reglamento, adjuntando más prueba para desvirtuar la acusación. Asimismo, por memorial de 1
de octubre de 2007, reiteró su apelación y solicitó la nulidad de obrados (fs. 109 a 157 vta.).

II.5. Mediante Resolución 023/2008, el Tribunal Disciplinario Superior Permanente de la


Policía Nacional, declaró probada la apelación y anuló obrados por cuanto el Presidente del
Tribunal Departamental incurrió en error al nombrar Presidente interino en forma directa, toda
vez que correspondía que los miembros de dicho Tribunal sean quienes elijan al Presidente
interino (fs. 198 a 200).

II.6. Devuelto el expediente al Tribunal Departamental Disciplinario Permanente de La Paz y


efectuada la audiencia de sorteo de vocales, el ahora accionante por memorial de 12 de mayo de
2008, opuso excepción de prescripción y extinción de la acción; de igual forma el 13 de ese
mismo mes y año, planteó incidente de nulidad por actividad procesal defectuosa, que fueron
declarados improbados mediante Auto Motivado 26/08 de 14 de mayo de 2008, emitido por el
Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz, argumentando que el Auto Inicial
del proceso fue dictado el 8 de mayo de 2006 y notificado el 14 de junio del mismo año, por lo
que fue promovida la acción dentro del término de ley, y en cuanto a la actividad procesal
defectuosa señala que no incide siendo de aplicación la SC 0225/2005, ya que si consideraba
que se vulneraron derechos y garantías debió hacer su reclamo oportuno ante la instancia
correspondiente (…) por lo tanto ha precluido la etapa en la que debió observar esos defectos,
además convalidó tácitamente porque no impugnó dentro del plazo legal, Resolución que fue
leída en audiencia, y conforme prevé el art. 126 del RFDSP, la defensa interpuso recurso de
apelación, el que fue diferido por el Tribunal Disciplinario para la resolución final, según acta de
juicio (fs. 221 a 222 vta.; 229 a 233; y, 240 a 242 y 247).

II.7. Realizado el proceso en audiencia pública, oral y contradictoria, el Tribunal Disciplinario


Departamental Permanente de La Paz, mediante Resolución Administrativa 063/08, resolvió
imponer en contra de Freddy Ortega Vásquez, la sanción de baja definitiva de la institución
policial, sin derecho a la reincorporación (fs. 243 a 257).

II.8. Por memorial de 16 de mayo de 2008, el accionante, interpuso recurso de apelación,


planteó la nulidad de actos y de la resolución de primera instancia (fs. 258 a 267 vta.), que fue
resuelto mediante Resolución del Tribunal Disciplinario Superior Permanente de la Policía
Nacional 405/2008, declarando improbada la apelación presentada, entre cuyos fundamentos se
resuelve el recurso de apelación sobre el incidente de actividad procesal defectuosa diferida por
el Tribunal Disciplinario y aprobando la Resolución Administrativa 063/08, notificándose al
procesado mediante cédula publicada en el tablero de cedulones e informaciones de Secretaría
General de ese Tribunal, el 8 de septiembre del 2008, en cumplimiento de la providencia de 5
del mes y año citados (fs. 281 a 290).

II.9. Mediante Resolución Administrativa 0768/08, el Comandante General de la Policía


Nacional, dispuso la baja definitiva de la institución policial, sin derecho a reincorporación del
ahora accionante, en aplicación de la Resolución 63/08 dictada por el Tribunal Disciplinario
Departamental de la Paz, por haber incurrido en la falta grave prevista en el art. 6 inc. "D"
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 877
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

numeral 25 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus sanciones de la Policía Nacional (fs.
300 a 301).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, alega que las autoridades policiales demandadas, vulneraron la garantía al debido
proceso, toda vez que dentro del proceso disciplinario seguido en su contra por deserción, se
dispuso su baja definitiva de la entidad policial sin derecho a reincorporación, habiendo
incurrido en las siguientes ilegalidades; a) El Fiscal Policial, sin tener facultad mediante
requerimiento y sin que corresponda acumuló dos procesos diferentes que se sustanciaron en su
contra, argumentando existir conexitud; b) Las supuestas ausencias injustificadas por las que se
adoptó dicha sanción fueron desvirtuadas con las bajas médicas respectivas emitidas por la Caja
Nacional de Salud (CNS), que no fueron debidamente valoradas; c) De conformidad con el art.
133 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional, precluyó la
facultad para procesarlo, por cuanto la falta por la que fue sometido a proceso se encuentra
prevista dentro del art. 6 inc."D" numerales 1 al 29 de la citada norma, que prescribe a los
veinticuatro meses de haberla cometido y no obstante de haber solicitado la prescripción le fue
rechazada. En consecuencia, corresponde determinar, en revisión, si los extremos demandados
son evidentes para conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es una acción tutelar de carácter extraordinario, cuya


finalidad es la protección de los derechos fundamentales de las personas, establecida en el art.
128 de la Constitución Política del Estado (CPE), y procede: "…contra actos u omisiones
ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la
Constitución y la ley".

A su vez, el art. 129 de la CPE establece que: "I. La Acción de Amparo Constitucional se
interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por
la autoridad correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal
competente, siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los
derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados. II. La Acción de Amparo
Constitucional podrá interponerse en el plazo máximo de seis meses, computable a partir de la
comisión de la vulneración alegada o de notificada la última decisión administrativa o judicial".

III.2. Subsidiariedad de la acción de amparo constitucional

Con carácter previo a efectuar el análisis de la problemática planteada por el accionante a través
de la presente acción, cabe señalar que la acción de amparo constitucional, conforme establecen
los arts. 128 y 129.I de la CPE, tendrá lugar "…contra los actos u omisiones ilegales o indebidos
de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman, o
amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley" y "siempre
que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías
restringidos, suprimidos o amenazados"; disposiciones que expresamente establecen que las
supuestas lesiones a los derechos fundamentales y garantías constitucionales deben ser reparadas
en la jurisdicción ordinaria, y sólo en defecto de ésta, de ser evidente la lesión al derecho
invocado e irreparable el daño emergente de la acción u omisión o de la amenaza de restricción
de los derechos, otorgue tutela la jurisdicción constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 878


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Es así, que como exigencia ineludible de la persona física o jurídica que considera haberse
vulnerado o restringido sus derechos o garantías fundamentales y que pretende la protección o
restablecimiento de los mismos, debe cumplir con el principio y ahora requisito legal de la
subsidiaridad, es decir buscar esa tutela al haber agotado los recursos o mecanismos legales o
administrativos con carácter previo a acceder a la justicia constitucional. Por ello, art. 129.I, de
la CPE establece, que esta acción tutelar debe ser interpuesta siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringida, suprimidos o
amenazados. El entendimiento expresado sigue el asumido por la SC 0622/2010-R de 19 de
junio, toda vez que la misma no contraviene el orden Constitucional vigente y es concordante
con los razonamientos expresados en el párrafo precedente.

De esa manera, recogiendo los entendimientos de la jurisprudencia constitucional, la SC


0777/2010-R de 2 de agosto, expresó: "En mérito al carácter subsidiario del amparo
constitucional, la SC 1337/2003-R, estableció subreglas para determinar su improcedencia por
subsidiariedad, cuando: '…1) las autoridades judiciales o administrativas no han tenido la
posibilidad de pronunciarse sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un medio de
defensa ni ha planteado recurso alguno, así: a) cuando en su oportunidad y en plazo legal no
se planteó un recurso o medio de impugnación, y b) cuando no se utilizó un medio de defensa
previsto en el ordenamiento jurídico; y 2) las autoridades judiciales o administrativas pudieron
haber tenido o tienen la posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios
de defensa, así: a) cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se daría en
casos de planteamientos extemporáneos o equivocados y b) cuando se utilizó un medio de
defensa útil y procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo no se
agotó, estando al momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de
resolución. Ambos casos, se excluyen de la excepción al principio de subsidiaridad, que se da
cuando la restricción o supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados,
ocasionen perjuicio irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional,
procede la tutela demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de
resolución'" .

III.3. Valoración de la prueba en la acción de amparo constitucional

Respecto a la valoración o compulsa de los elementos probatorios presentados por las partes
dentro de las acciones tutelares, invocando mala, inadecuada o falta de valoración de los
mismos, por parte de las autoridades jurisdiccionales ordinarias o administrativas, cabe
mencionar que esta facultad valorativa corresponde a dichas autoridades, no siendo competencia
de la jurisdicción constitucional efectuar una nueva valoración de la prueba que en sus instancias
pertinentes fueron compulsadas por las autoridades judiciales o administrativas investidas de esa
potestad emanada de la ley, puesto que lo contrario significaría desconocer esa atribución
privativa y generar un desequilibrio entre jurisdicciones; aspecto que no ha sido comprendido y
que en muchas ocasiones ha generado confusión en el foro jurídico. Empero, en el caso que se
hubieran vulnerados derechos o garantías fundamentales en esa labor valorativa, se abre el
ámbito de protección de la jurisdicción constitucional, no para revalorizar esa prueba sino para
restablecer el derecho conculcado haciendo que la autoridad que ocasionó la lesión, la repare, a
través de la acción de amparo constitucional cuya finalidad es la protección de los derechos y
garantías fundamentales de la persona, consagrados por la CPE.

De la misma manera, en la hipótesis de que se hubiere valorado la prueba apartándose de los


marcos legales de razonabilidad y equidad previsibles para decidir o se haya omitido arbitraria e
indebidamente valorarla, ocasionando lesión a quien la demanda, será la justicia constitucional
que tutele esa vulneración. El entendimiento expresado sigue el asumido por la SC 0676/2011-

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 879


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

R, de 20 de mayo, toda vez que la misma no contraviene el orden Constitucional vigente y es


concordante con los razonamientos expresados en el párrafo precedente.

III.4. Interpretación de la legalidad ordinaria

En la presente acción tutelar, conforme a los antecedentes que cursan en obrados y la pretensión
de la ahora accionante, es imperioso referirse a la interpretación de la legalidad ordinaria,
respecto a la cual la jurisdicción constitucional se ha pronunciado, señalando que: "Si bien la
interpretación de la legalidad ordinaria debe ser labor de la jurisdicción común, corresponde a
la justicia constitucional verificar si en esa labor interpretativa no se han quebrantado los
principios constitucionales informadores del ordenamiento jurídico, entre ellos, los de
legalidad, seguridad jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y debido
proceso; principios a los que se hallan vinculados todos los operadores jurídicos de la nación;
dado que compete a la jurisdicción constitucional otorgar la protección requerida, a través de
las acciones de tutela establecidas antes en los arts. 18 y 19 de la CPEabrg, ahora en los arts.
125 y 128 de la CPE, ante violaciones a los derechos y garantías constitucionales, ocasionadas
por una interpretación que tenga su origen en la jurisdicción ordinaria, que vulnere principios
y valores constitucionales".

En situaciones en las que se exige a la jurisdicción constitucional examinar la interpretación


realizada por la jurisdicción ordinaria, se debe tener presente que la labor interpretativa de las
normas legales ordinarias corresponde a los jueces y tribunales de la jurisdicción ordinaria,
pues dicha labor interpretativa debe ser desarrollada con resguardo del sistema de valores
supremos, así como de los principios fundamentales que constituyen la base del sistema
constitucional boliviano, así como respetando o resguardando los derechos fundamentales y
garantías constitucionales, por lo que corresponde a la jurisdicción constitucional verificar si
en esa labor interpretativa, la jurisdicción ordinaria no ha quebrantado los cánones referidos;
es decir, el sistema de valores supremos y principios fundamentales, o se ha vulnerado los
derechos y garantías constitucionales" (SC 1846/2004-R SSCC y 2002/2010).

III.4.1. Requisitos para la interpretación de la legalidad ordinaria

Para que la jurisdicción constitucional realice la interpretación de la legalidad ordinaria, ante una
supuesta lesión de derechos constitucionales en la interpretación efectuada por la jurisdicción
ordinaria, se asume el entendimiento contenido en las SSCC 0085/2006-R y 2045/2010-R, entre
otras, al ser imprescindible que quien la solicite cumpla con los requisitos de: 1) Expresar en
forma precisa los fundamentos jurídicos en los que sustenta su posición, fundamentos en los que
deberá exponer con claridad y precisión los principios o criterios interpretativos que no fueron
cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y
consiguiente aplicación de la norma interpretada; y, 2) Exponer qué principios fundamentales o
valores supremos no fueron tomados en cuenta o fueron desconocidos por el intérprete al
momento de desarrollar la labor interpretativa y asumir la decisión impugnada; pues resulta
insuficiente la mera relación de hechos o la sola enumeración de las normas legales
supuestamente infringidas, porque sólo en la medida en que el recurrente expresa adecuada y
suficientemente sus fundamentos jurídicos la jurisdicción constitucional podrá realizar la labor
de contrastación entre la interpretación legal realizada por la jurisdicción ordinaria y los
fundamentos que sustentan la interpretación y las conclusiones a las que arribó, con los
fundamentos y pretensiones expuestos por el accionante.

III.5. Análisis del caso de autos

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 880


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En el caso que se examina, el accionante alega que el Tribunal Superior Disciplinario de la


Policía Nacional, ahora demandado, por Resolución 405/2008, declaró improbado el recurso de
apelación que planteó contra el fallo de primera instancia y confirmó la sanción impuesta por la
falta grave de deserción, consistente en su baja definitiva de la institución policial, sin derecho a
reincorporación; autoridades que omitieron considerar: i) Los defectos insubsanables
denunciados como la acumulación de dos procesos diferentes por conexitud con el simple
requerimiento del Fiscal Policial; ii) Las bajas médicas emitidas por la Caja Nacional de Salud
que presentó como prueba de descargo; y, iii) La preclusión de la facultad para procesarlo.

III.5.1. Sobre la acumulación de dos procesos por requerimiento del Fiscal Policial

Con relación a la denuncia efectuada sobre la acumulación de dos procesos diferentes que
fueron acumulados por el Fiscal Policial mediante un simple requerimiento, sin tener facultad
para ello, de la revisión de los antecedentes que cursan en obrados se evidencia que el 17 de
diciembre de 2004, la Dirección Nacional de Responsabilidad Profesional de la Policía, inició
investigación contra el accionante, aduciendo inasistencia injustificada al servicio los días 2, 3,
4, y 5 de noviembre de 2004, asignándose al caso, el número 952/04, a cuyo efecto adjuntaron
los informes correspondientes, emitiendo el investigador asignado al caso, la citación para que
preste su declaración informativa acompañado de su abogado. Posteriormente, el 18 de enero de
2005, se le inició otra investigación por no haber asistida sus funciones desde el 2 hasta el 9 de
enero de ese año, en mérito a lo cual, por Requerimiento de 11 de febrero de 2005, el Fiscal
Policial de la Dirección Nacional de Responsabilidad Profesional, requirió para que el caso
067/05, correspondiente a la segunda investigación, sea arrimado al caso 952/04, con el
argumento de tratarse del mismo autor y de las mismas faltas.

En mérito al Informe en Conclusiones elaborado por el investigador asignado al caso, el 27 de


junio de 2005, el Fiscal Policial de la Dirección Nacional de Responsabilidad Profesional,
presentó denuncia contra el ahora accionante por la falta grave de deserción, en base a la cual, el
Presidente del Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de La Paz, dictó el Auto inicial
del proceso disciplinario de 8 de mayo de 2006, por la supuesta transgresión del art. 6, inc. "D",
numeral 25 del Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional,
disponiendo que se programe la audiencia de sorteo de Vocales y audiencia de proceso oral,
notificándose al accionante el 16 de junio del indicado año; sin embargo, el accionante, no
presentó reclamo alguno sobre la acumulación de las dos denuncias en su contra en un solo
proceso disciplinario, permitiendo que se tramite el juicio oral que concluyó con la Resolución
Administrativa 084/2007, que lo sancionó con la baja definitiva de la institución policial;
dejando precluir su derecho de impugnar en su oportunidad, ese acto que ahora considera lesivo,
pues para ello pudo hacer uso del recurso de reposición establecido en los arts. 124 y 125 del
Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional; en cuyo mérito,
respecto a esta problemática, el presente recurso cae en la causal de improcedencia contenida en
el art. 129.I de la CPE y 96.3 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC); consiguientemente
corresponde denegar la tutela solicitada respecto a este punto.

III.5.2. Respecto a la falta de valoración de la prueba presentada

Con relación a la omisión del Tribunal Disciplinario Superior denunciado por el accionante, de
no valorar la prueba que presentó, consistente en las bajas médicas que según refiere desvirtúan
la falta por la cual se sustanció el proceso, así como el informe expedido por la Trabajadora
Social quien constató su estado de salud; conforme se tiene señalado en el Fundamento III.3 de
la presente resolución, la jurisdicción constitucional no puede ingresar a revisar la valoración de
la prueba efectuada por las autoridades jurisdiccionales a cargo de administrar justicia ordinaria,
ni de las administrativas en la aplicación de las reglas disciplinarias en sede administrativa, pues
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 881
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

el accionante pretende que a través de la acción de amparo constitucional, se revise la prueba de


descargo aportada en la sustanciación del proceso disciplinario y se deje sin efecto la Resolución
emitida por el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía que confirmó la sanción de baja
definitiva de la institución, sin derecho a reincorporación, no obstante que la facultad de
valoración de la prueba, corresponde exclusivamente a los órganos jurisdiccionales o
disciplinarios, y menos atribuirse la facultad de revisar la valoración de la prueba que hubieran
efectuado las autoridades ahora demandadas, puesto que no es a través del amparo
constitucional que se pueda determinar si las bajas médicas aportadas por el accionante como
prueba de descargo, justifican plenamente la inconcurrencia a su fuente laboral o no, como
tampoco pronunciarse sobre la validez de las mismas. Consiguientemente, también respecto a
este punto denunciado, el Tribunal se encuentra impedido conceder la tutela demandada.

III.5.3. Sobre la prescripción de las faltas disciplinarias

De los antecedentes procesales se constata que el accionante denuncia que dentro del proceso
disciplinario policial que se le siguió por supuesta deserción, opuso excepción de prescripción y
extinción de la acción, la primera de las cuales fue declarada improbada mediante Auto
Motivado 26/08 de 14 de mayo del mismo año, emitido por el Tribunal Disciplinario
Departamental Permanente de La Paz, argumentando que el auto inicial del proceso fue dictado
el 8 de mayo de 2006 y fue notificado el 14 de junio del mismo año, por lo que fue promovida la
acción dentro del término de ley.

Al respecto, cabe señalar, que conforme se ha referido precedentemente, para que la jurisdicción
constitucional realice la interpretación de la legalidad ordinaria, el accionante debe cumplir con
los requisitos señalados en el Fundamento Jurídico III.4.1. del presente fallo, los que en este
caso no han sido cumplidos, toda vez que la ahora accionante en el memorial de acción de
amparo constitucional, señala: "…porque se prosiguió el juicio a pesar de haber demostrado que
se acumularon dos procesos diferentes en uno mismo, con un simple requerimiento de
conexitud, además que las faltas que se le atribuyeron fueron justificadas en su oportunidad y
que la facultad para procesarlo había precluído, conforme establece el art. 133 del Reglamento
de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional, las faltas contempladas en el art.
6 inc. "D" numerales 1 al 29, prescriben a los veinticuatro meses de cometida; sin embargo,
dicho Tribunal mediante Resolución 405/2008 de 19 de agosto, declaró improbada la apelación,
sancionándolo con baja definitiva de la institución, sin derecho a reincorporación, argumentando
que el proceso comienza con el Auto Inicial del Proceso y por tanto no opera la prescripción",
sin expresar adecuadamente ni precisar los fundamentos jurídicos por los cuales considera se
lesionaron sus derechos o garantías fundamentales, omitiendo exponer con claridad y precisión
los principios o criterios interpretativos que no fueron cumplidos o desconocidos por el Tribunal
Disciplinario Departamental Permanente de la Paz, limitándose a citar el art. 133 del
Reglamento de Faltas Disciplinarias y sus Sanciones de la Policía Nacional, las faltas
contempladas en el art. 6 inc. "D" numerales 1 al 29, que prescriben a los veinticuatro meses de
cometidas; omisiones que no hacen viable que se realice la interpretación de la legalidad
ordinaria por la jurisdicción constitucional, al no haberse cumplido -como se dijo- con los
requisitos que se exigen para proceder a ello.

En consecuencia, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones del art. 128 de
la CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al conceder la acción de amparo constitucional no
efectuó una debida compulsa de los antecedentes procesales ni dio correcta aplicación al citado
precepto constitucional.

POR TANTO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 882


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución 014/09 de 23 de marzo de 2009, cursante de fs. 774 a 779, dictada
por la Sala Civil Cuarta de la Corte Superior del Distrito Judicial-ahora Tribunal Departamental
de Justicia- de La Paz; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0092/2012


Sucre, 19 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Carmen Silvana Sandoval Landivar
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2008-17799-36-AAC
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución de 23 de abril de 2011, cursante de fs. 250 a 253, pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Manuel Alejandro Córdova Olivares
en representación de Beatriz Camacho Balderrama contra Juan Taquichiri Jiménez, Alcalde
y Katia Karem Herrera Terán, Autoridad Sumariante, ambos del Gobierno Municipal de
Llallagua.

I.ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante, mediante memorial presentado el 8 de abril de 2008, cursante de fs. 158 a 173,
señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Su representada, ingresó a trabajar a la Alcaldía de Llallagua a partir del 5 de julio de 1978,


desempeñando diferentes funciones en la mencionada institución; empero, a denuncia de Olga
Dueñas Gutiérrez, se le inició un proceso disciplinario por memorando de 26 de julio de 2007,
que fue instruido por el Alcalde Municipal de Llallagua; por ello, la Jueza Sumariante de la
Alcaldía Municipal de esa localidad, dictó el 30 del citado mes y año, el Auto de apertura del
proceso administrativo por contravención del art. 77 inc. h) de la Ley del Sistema de Control
Fiscal (LSCF), referido a apropiación arbitraria de bienes patrimoniales del Estado,
atribuyéndole vulneración de los Reglamentos Internos y bajo el antecedente de haber recibido
dinero por pago de impuestos de un bien inmueble, y el mismo que no fue registrado como
ingreso en cuentas de la institución. Concluido el proceso, la autoridad sumariante, pronunció la
Resolución 03/2007 de 10 septiembre, disponiendo la destitución de su representada sin derecho
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 883
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

a percibir beneficios sociales; contra la mencionada determinación, interpuso recurso de


revocatoria, el cual fue ratificado mediante Resolución de 24 de septiembre de 2007, ameritando
su impugnación por recurso jerárquico de 28 del mismo mes y año, que fue resuelto a través de
la Resolución de 15 de octubre de ese año, emitida por Juan Taquichiri Jiménez, Alcalde de
Llallagua, quien confirmó lo dispuesto por la Autoridad Sumariante; en cuya virtud, se emitió el
memorando 00088877 de "24'' de octubre del referido año, disponiendo su destitución.

Con los actos anteriormente mencionados, según refiere el accionante, se lesionó la garantía al
debido proceso de su mandante, pues si bien un proceso administrativo se inicia con el auto de
apertura, conforme el art. 21 inc. a) del Decreto Supremo (DS) 23318 - modificado por el DS
26237; sin embargo, al no haber identificado la causal en la cual incurrió su representada y sólo
referirse a la contravención de apropiación arbitraria de bienes patrimoniales del Estado, sin
identificar el proceso y su grado de participación, vulneró el debido proceso. Asimismo, alega
que al haberse dispuesto en la mencionada Resolución la destitución sin derecho a beneficios
sociales de su representada, dañó su dignidad como persona y funcionaria, además que las
Resoluciones dictadas carecen de fundamentación que explique el motivo por el que se coarta el
derecho a sus beneficios sociales.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de los derechos de su representada a la "seguridad jurídica",


al trabajo, al ejercicio de la función pública y a la garantía del debido proceso, citando al efecto
los arts. 7 incs. a) y d), 16.IV y 40.2 de la Constitución Política del Estado abrogada (CPEabrg).

I.1.3. Petitorio

El accionante por su representada, solicita que se conceda la acción de amparo y se disponga: a)


La nulidad del Auto de apertura del proceso administrativo; b) La nulidad de las Resoluciones
de 10 y 24 de septiembre de 2007, que fueron emitidas por la Autoridad Sumariante; c) La
nulidad de la Resolución del 15 de octubre de 2007, pronunciada por el Alcalde; d) La autoridad
Sumariante dicte nuevo Auto de apertura de proceso administrativo, especificando las normas
jurídicas vulneradas; e) La inmediata reincorporación de su mandante a su fuente laboral; y, f)
El pago de haberes desde la fecha de su destitución, con expresa condenación de costas,
determinando además la existencia de responsabilidad civil de las autoridades.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 27 de abril de 2011, según consta en el acta cursante de fs. 217
a 222 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El accionante, ratificó los fundamentos de su demanda y amplió los mismos en los siguientes
términos: 1) La Jueza Sumariante debió haber consignado en el Auto inicial de apertura de
proceso administrativo, los arts. 1 inc. c) y 27 inc. c) de la Ley de Administración y Control
Gubernamental (LACG), debiendo tipificar el hecho, conforme a las exigencias del debido
proceso; y, 2) La ausencia de los motivos o fundamentos de una resolución no puede ser
subsanable, por ello, se considera carente de validez las Resoluciones impugnadas.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionario público demandados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 884


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

El representante de los demandados, mediante informe escrito cursante a fs. 214 y vta. de
obrados, expresó que: i) El 30 de julio de 2007, su defendida Katia Karem Herrera Terán, Jueza
Sumariante, emitió el Auto de apertura de proceso y puso en conocimiento de la representada de
Beatriz Camacho Balderrama, quien no efectuó la respectiva objeción en esa oportunidad; ii)
Por Resolución 03/2007, conforme lo previsto en el Reglamento de la Responsabilidad por la
Función Pública, se estableció responsabilidad civil contra la representada del accionante, por
existir indicios de responsabilidad; ante tal situación, interpuso recurso de revocatoria, y luego
de la confirmación de la primera Resolución planteo el recurso jerárquico que fue pronunciado
el 15 de octubre de ese año, confirmando lo dispuesto por la Jueza Sumariante; y iii) La
representada del accionante al no haber desvirtuado los extremos que se le atribuyeron por el
cobro de un monto de dinero, la omisión y el arqueo respectivo, incumplió en sus funciones,
incurriendo en la comisión de apropiación indebida de los recursos del Estado.

Por otra parte el abogado externo del municipio de Llallagua; en audiencia señaló que: a) Se
instalo proceso administrativo contra su defendido y la representada del accionante, quien
asumió conocimiento de todas las actuaciones del proceso; y, b) En ninguna etapa del proceso
desvirtuó el hecho, sólo acredito como prueba algunos certificados referentes a su conducta, sin
demostrar los extremos acusados en el proceso administrativo.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El abogado de Juan Calizaya Dorado, ex-Encargado de la Unidad de Recaudaciones de


Llallagua; manifestó que: 1) Por Auto de apertura de 30 de julio se instauró proceso contra su
defendido y la representada del accionante por haber contravenido el art. 77 inc. h) de la Ley de
Control Fiscal por Apropiación de Bienes Patrimoniales del Estado; y, 2) Además dispuso su
destitución sin goce de beneficios sociales, infringiendo de esa manera el art. 48 de la CPE, sin
considerar que lo que busca un proceso administrativo es enmendar conductas.

I.2.4. Resolución

El Juez de Partido Mixto, Liquidador y de Sentencia de Uncía del Distrito Judicial Potosí, en
suplencia legal de su similar del juzgado de Llallagua, constituido en Juez de garantías,
pronunció la Resolución de 27 de abril, cursante de fs. 250 a 253 de obrados, por la que
concedió la acción de amparo constitucional "que la autoridad sumariante proceda a dictar
nuevo Auto de Apertura de proceso sumario contra Beatriz Camacho Balderrama y Juan
Calizaya Dorado y se proceda a la investigación de la Responsabilidad que pudiera emerger de
esa investigación, dejando sin efecto el proceso administrativo en contra de la representada del
accionante", bajo los siguientes fundamentos resuelto: i) La Autoridad Sumariante, al haber
emitido el Auto de iniciación del proceso no existe ninguna cuantificación, calificación, ni se
estableció la infracción a ninguna norma interna que hubiera sido infringida por la representada;
ii) La Autoridad Sumariante no se pronuncio a las observaciones efectuadas a la Resolución
3/2007; ni existió un debido pronunciamiento al recurso de revocatoria por parte de la autoridad
referida; iii) El recurso jerárquico que fue resuelto por el Alcalde Municipal de Llallagua, no se
encuentra debidamente fundamentado, toda vez que dicha autoridad se limitó a efectuar una
relación de los hechos.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 885
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida


competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. El 20 de julio de 2007, el Jefe de Recursos Humanos de la Alcaldía Municipal de


Llallagua, hizo conocer al Alcalde de esa localidad la denuncia verbal interpuesta por Olga
Dueñas Gutiérrez contra Beatriz Camacho Balderrama, sobre el cobro indebido de los impuestos
de sus inmuebles y la omisión del sello respectivo en sus facturas, recomendando la suspensión
de la representada del accionante por 10 días, conforme lo establecido en el art. 51 incs. a) y b)
del su Reglamento Interno (fs. 2).

II.2. Por memorando de 25 de julio de 2007, el Alcalde Municipal de Llallagua, instruyó la


apertura de proceso administrativo contra la representada del accionante (fs. 1).

II. 3. El 30 de julio de 2007, Katia Karem Herrera Terán, Jueza Sumariante de la Alcaldía de
Llallagua, aperturó de oficio, proceso administrativo contra la defendida del accionante, "…por
haber recibido dineros por pago de impuestos de un bien inmueble y estos no fueron registrados
como ingresos dentro de la Institución Municipal, ya que de acuerdo al informe del jefe de
recursos humanos se colige que estos funcionarios hubieran cobrado de forma irregular" (sic);
por ello, se dispuso la apertura del proceso interno "…por la contravención al art. 77 inc. h) de la
Ley de Sistema Control Fiscal, por apropiación arbitraria de bienes patrimoniales del Estado, así
como al reglamento interno por la violación a las normas que regulan la conducta del
funcionario" (sic) (fs. 10 a 11).

II.4. La Jueza Sumariante por Resolución 3/2007 de 10 de septiembre, dispuso la destitución,


sin goce de haberes ni beneficios sociales de su representada, "por haber omitido sellarlos
después de varios días, no realizar arqueos diarios de ingresos a Caja Central para la verificación
de faltantes y sobrantes de dinero; asimismo, al haber omitido en el formulario, detalle de
recaudaciones en el rubro de inmuebles de ingreso del monto de Bs.382" (sic) (fs. 97 a 100).

II.5. Por memorial de recurso de revocatoria de 18 de septiembre de 2007, la representada del


accionante, impugnó la Resolución 3/2007, arguyendo falta de fundamentación, toda vez que: 1)
No se demostró la existencia de daño económico a la institución ni tampoco a la denunciante;
debiendo haber expuesto los hechos, efectuar la debida fundamentación legal y citar las normas
en que sustenta la parte dispositiva; 2) No estableció cuáles fueron las razones para determinar
su destitución sin derecho a la percepción de beneficios sociales; y, 3) No tomó en cuenta con
relación al pago de impuestos, que ya fue conciliado, prueba que demuestra la inexistencia de
daño económico (fs. 103 y 104).

II.6. Katia Karem Herrera Terán, Jueza Sumariante de la Alcaldía de Llallagua, rechazó el
recurso de revocatoria que fue planteado por la representada del accionante, bajo los siguientes
fundamentos: i) Simples certificados no acreditan y no son suficientes para desvirtuar la
responsabilidad en la cual incurrió la accionante; y, ii) Un proceso administrativo se inicia a
través de la contravención a la norma legal vigente, no sólo por el daño causado, sujeción a los
arts. 28 inc. a) y 29 de LACG, concordante con el art. 18 del DS 23318-A (fs. 114 a 116).

II.7. Por memorial de 28 de septiembre de 2007, la representada del accionante presentó el


recurso jerárquico, argumentando que la Resolución de 24 de septiembre de 2007, carece de una
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 886
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

debida fundamentación, en sentido de "no haberse pronunciado con relación sobre todas las
cuestiones planteadas en el recurso de revocatoria; por ello, considera un atentado al debido
proceso" (sic). (118 a 121).

II.8. Por Resolución de 15 de octubre de 2007, el Alcalde Municipal de Llallagua, confirmó la


Resolución de la Autoridad Sumariante, alegando que la accionante "tampoco adjuntó prueba
alguna limitándose a señalar que no se causó ningún daño a la institución, pero no desvirtuó la
responsabilidad administrativa" (sic) (fs. 124).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante considera que las autoridades demandadas vulneraron los derechos de su


representada a la "seguridad jurídica", al trabajo, al ejercicio de la función pública y la garantía
del debido proceso; toda vez, que se instauró un proceso administrativo en su contra
atribuyéndole cobros indebidos que culminó con la Resolución 03/2007 de 10 de septiembre,
emitido por la Autoridad Sumariante disponiendo su destitución sin goce de beneficios sociales;
motivo por el cual, interpuso ante la misma autoridad el recurso de revocatoria que fue resuelto
sin una debida fundamentación; y a pesar de ello, fue confirmada en el jerárquico por el Alcalde
Municipal de Llallagua mediante Resolución de 15 de octubre de 2007, que de igual forma
carece de motivación, culminando el atropello con la emisión del memorando 8877 de 23 de
octubre de 2007, que dispuso la destitución de su representada sin derecho a beneficios sociales.
En consecuencia corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. El debido proceso

El debido proceso, está reconocido constitucionalmente como derecho y garantía jurisdiccional a


la vez, por los arts. 115.II y 117.I de la Constitución Política del Estado (CPE), y como derecho
humano por los arts. 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y 14 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

III.2. Falta de la motivación de las resoluciones

La motivación de las resoluciones es un requisito elemental del derecho al debido proceso,


conforme se encuentra establecido en la SC 1057/2011-R de 1 de julio, refiere que: "…las
resoluciones que emiten las autoridades judiciales, deben exponer los hechos, realizar la
fundamentación legal y citar las normas que sustentan la parte dispositiva de esas resoluciones,
exigencia que se torna aún más relevante cuando el Juez o Tribunal debe resolver en apelación
o casación la impugnación de las resoluciones pronunciadas por las autoridades inferiores…"

(…)

La citada Sentencia Constitucional continua señalando que: "…debe imprescindiblemente


exponer los hechos, realizar la fundamentación legal y citar las normas que sustenta la parte
dispositiva de la misma. Que, consecuentemente cuando un Juez omite la motivación de una
Resolución, no sólo suprime una parte estructural de la misma, sino también en los hechos toma
una decisión de hecho no de derecho que vulnera de manera flagrante el citado derecho [debido
proceso] que permite a las partes conocer cuáles son las razones para que se declare en tal o cual
sentido; o lo que es lo mismo cuál es la ratio decidendi que llevó al juez a tomar la decisión…".

En similar sentido la SC 0577/2004-R de 15 de abril, ha mencionado que: "Esta exigencia de


fundamentar las decisiones, se torna aún más relevante cuando el Juez o Tribunal debe resolver
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 887
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

en apelación la impugnación de las resoluciones pronunciadas por las autoridades de primera


instancia;(…), es imprescindible que dichas Resoluciones sean suficientemente motivadas y
expongan con claridad las razones y fundamentos legales que las sustentan y que permitan
concluir, que la determinación sobre la existencia o inexistencia del agravio sufrido fue el
resultado de una correcta y objetiva valoración de las pruebas, del mismo modo que se exige al
apelante cumplir con la obligación de fundamentar los agravios; por cuanto, en la medida en
que las resoluciones contengan, los fundamentos de hecho y de derecho, el demandado tendrá
la certeza de que la decisión adoptada es justa; por lo que no le esta permito a un Juez o
Tribunal, reemplazar la fundamentación por la relación de antecedentes, la mención de los
requerimientos de las partes o hacer alusión de que el Juez de instancia obró conforme a
derecho, (…); con mayor razón, si se tiene en cuenta que el contar con una Resolución
debidamente fundamentada y motivada es un derecho fundamental de la persona y forma parte
del debido proceso"

De la misma manera la referida sentencia menciono respecto a las resoluciones que no se


encuentran motivadas "y se emite únicamente la conclusión a la que ha arribado el juzgador,
son razonables las dudas del justiciable en sentido de que los hechos no fueron juzgados
conforme a los principios y valores supremos, vale decir, no se le convence que ha actuado con
apego a la justicia, por lo mismo se le abren los canales que la Ley Fundamental le otorga para
que en búsqueda de la justicia, acuda a este Tribunal como contralor de la misma, a fin de que
dentro del proceso se observen sus derechos y garantías fundamentales, y así pueda obtener
una resolución que ordene la restitución de dichos derechos y garantías, entre los cuales, se
encuentra la garantía del debido proceso, que faculta a todo justiciable a exigir del órgano
jurisdiccional a cargo del juzgamiento una resolución debidamente fundamentada, (...)
Finalmente, cabe señalar que la motivación no implicará la exposición ampulosa de
consideraciones y citas legales, sino que exige una estructura de forma y de fondo. En cuanto a
esta segunda, la motivación puede ser concisa, pero clara y satisfacer todos los puntos
demandados, debiendo expresar el Juez sus convicciones determinativas que justifiquen
razonablemente su decisión en cuyo caso las normas del debido proceso se tendrán por
fielmente cumplidas. En sentido contrario, cuando la resolución aún siendo extensa no traduce
las razones o motivos por los cuales se toma una decisión, dichas normas se tendrán por
vulneradas".

De lo mencionado, se desprende que el derecho al debido proceso se encuentra contextualizado


en la Constitución Política del Estado como un derecho fundamental, y su cumplimiento es de
carácter obligatorio, al considerar que toda resolución pública o administrativa, debe estar
debidamente motivada; al ser un requisito primordial, su omisión o incumplimiento de éste,
constituye una lesión al referido derecho.

III.3. Análisis del caso de concreto

Precisados los alcances del derecho al debido proceso y sus elementos constitutivos entre los
cuales está el derecho a una resolución fundamentada y motivada, corresponde ingresar al
análisis de la problemática planteada emergente de la interposición de la acción de amparo
constitucional.

Así, en el caso que nos ocupa, se tiene que el accionante manifiesta que se lesionaron los
derechos a la "seguridad jurídica", al trabajo, al ejercicio de la función pública y a la garantía del
debido proceso de su representada, por haberla destituido de sus funciones de manera ilegal y
sin goce de beneficios sociales; determinación que fue tomada por la Jueza Sumariante de la
Alcaldía Municipal de Llallagua, a través de la Resolución 3/2007, misma que fue impugnada
mediante el recurso de revocatoria por no haberse precisado sobre los puntos de su destitución
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 888
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

sin goce de beneficios sociales; sin embargo, fue ratificada la misma, siendo impugnada por el
recurso jerárquico que de igual forma se pronunció sin una debida fundamentación y motivada.

De lo anteriormente referido, se deduce que el Auto de apertura que fue emitido por la Jueza
Sumariante, ahora impugnada, se evidencia que se encuentra debidamente fundamentada
conforme a lo previsto en el art. 21 inc. b) del DS 23318-A; por ello, no corresponde dejar sin
efecto el referido Auto; sin embargo, con relación a la Resolución 03/2007, se advierte que la
misma en su parte considerativa señaló que "al omitir sellar los comprobantes entregados al
contribuyente Olga Dueñas y sellarlos después de varios días, no realizar arqueos diarios de
ingreso a Caja Central para la verificación de faltas y sobrantes de dinero, así mismo haber
omitido en el formulario detalle de recaudaciones en el rubro de inmuebles el ingreso de ese
monto de Bs. 382 por pago de impuesto de inmueble" (sic); sin embargo, no se explica en
ninguna parte los motivos por lo cuales se dispuso su destitución sin goce de beneficios sociales,
de lo cual se colige que la Jueza Sumariante no se pronunció con relación a los motivos por los
cuales se le destituyó sin goce de sus beneficios sociales en el cargo que ejercía en la Alcaldía
Municipal de Llallagua.

Con relación a la Resolución que resolvió el recurso de revocatoria de 24 de septiembre de 2007,


la Jueza Sumariante fundamentó de la siguiente manera " a) Que simples certificados no
acreditan y no son suficientes para desvirtuar la responsabilidad en la cual incurrió la accionante,
b) Un proceso administrativo se inicia a través de la contravención a la norma legal vigente, no
sólo por el daño causado, sujeción a los arts. 28 inc. a) y 29 de Ley 1178 concordante con el art.
18 del DS 23318" (sic), de lo descrito, se evidencia nuevamente que la Autoridad Sumariante no
se pronunció sobre los beneficios sociales, no explicó las causas por las cuales se destituyo a la
representada del accionante de sus funciones; por ello, no se encuentra debidamente
fundamentada.

Por otra parte, en cuanto a la Resolución que resolvió el recurso jerárquico de 15 de octubre de
2007, el Alcalde Municipal de Llallagua, fundamento de la siguiente manera: "que la accionante
no adjunto prueba alguna limitándose a señalar que no se causo ningún daño a la institución pero
no desvirtúa la responsabilidad administrativa" (sic); de lo mencionado, se deduce que de igual
forma la referida autoridad no se pronunció con relación a los motivos de su destitución sin los
beneficios sociales; por ende, se asevera que no se encuentra debidamente fundamentada.

De lo mencionado anteriormente, se evidencia que las autoridades demandadas, incurrieron en


un verdadero agravio al no pronunciarse con relación a todos puntos solicitados por la mandante,
atentado de esa forma al debido proceso y en consecuencia también se lesionó el derecho al
trabajo.

Por lo que resulta evidente que la falta de motivación y fundamentación en las Resoluciones
impugnadas no es clara ni objetiva, aspecto que amerita se otorgue la tutela que brinda la acción
de amparo constitucional, pues es evidente que dichas Resoluciones impugnadas no cumplen
con las condiciones y exigencias en cuanto al debido proceso que se encuentran establecidas en
la jurisprudencia constitucional y desarrollada en el Fundamentación Jurídica III.2 de la presente
Sentencia Constitucional. En consecuencia la vulneración antes referida amerita ser tutelada.

En relación al derecho a la "seguridad jurídica", no corresponde pronunciarse; toda vez, que la


seguridad jurídica es consideraba un principio y no un derecho, por lo tanto no puede ser
tutelada por esta acción tutelar; y, finalmente en cuanto al derecho a la función pública, el
accionante no demostró en que forma se vulneró el citado derecho de Beatriz Camacho
Balderrama.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 889


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

De todo lo expuesto, se concluye que el Juez de garantías, al haber concedido la acción de


amparo constitucional, obró parcialmente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:

1º APROBAR en parte la Resolución 27 de abril de 2011, cursante de fs. 250 a 253,


pronunciada por el Juez de Partido Mixto, de Sentencia y Liquidación de Uncía, del Distrito
Judicial de Potosí en Suplencia Legal de su similar del Juzgado de Llallagua; y, en
consecuencia;

2º DENEGAR la tutela en relación al auto de apertura por cuanto se encuentra debidamente


fundamentada.

3º CONCEDER la tutela en relación a la Resolución 003/2007 de 10 de septiembre y las


Resoluciones de 24 septiembre y 15 de octubre de igual año, disponiéndose la nulidad de las
mismas.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez .-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco .-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0098/2012


Sucre, 19 de abril 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relator: Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales
Acción de amparo constitucional
Expediente: 2009-20701-42- AAC
Departamento: La Paz

En revisión de la Resolución 048/2009 de 8 de octubre cursante de fs. 239 a 241, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Cindy Raquel Suarez Zabala en
representación de Bolivian Oil Services (BOLSER Ltda.), contra Federico Knaudt Orro
Gerente General y miembros del Comité de Vigilancia de la Bolsa Boliviana de Valores
(BBV) S.A. compuesto por Roberto Gisbert Ríos, Alberto Zuazo Vélez y Marcelo
Urdininea Dupleich.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 890


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

En el memorial de acción de amparo constitucional presentado el 28 de septiembre de 2009,


cursante de fs. 25 a 30; la accionante manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro de un proceso de imposición de sanciones realizada por el Comité de Vigilancia de la


BBV S.A. contra la empresa que representa, BOLSER Ltda. ésta presentó ante el Comité de
Vigilancia que es parte de la BBV, recurso indirecto de inconstitucionalidad, en el que se
denunció la inconstitucionalidad del Reglamento Interno de Registro y Operaciones de la
mencionada Bolsa, así como de la Resolución Administrativa (RA) SPVS/IV/ 924 de 8 de
noviembre de 2007, el mismo que deviene de los siguientes antecedentes:

El 20 de noviembre de 2008, BOLSER Ltda., resolvió en Asamblea de Socios participar en la


constitución de una empresa en el exterior, hecho que se puso en conocimiento de la BBV sin
reconocer a favor de esa empresa privada, la competencia de revisar o rechazar la información
remitida. Ante ese hecho, la mencionada entidad inició un proceso de aplicación de sanciones,
en base a atribuciones que ilegalmente le confiere su propio Reglamento Interno y basados en un
supuesto incumplimiento de plazos; a ese efecto, el Comité de Vigilancia de la BBV S.A;
mediante Resolución 01/2009 de 23 de marzo de 2009, decidió “sancionar” cada uno de los
incumplimientos de la Sociedad Boliviana Oil Services Ltda., referidos a la información de un
hecho relevante y a la presentación de la documentación respaldatoria fuera del plazo
establecido para el efecto, aplicando una multa de cuarto rango por cada día hábil de retraso,
siendo comunicada y ejecutada esta sanción por el Gerente General Federico Knaudt, mediante
nota 390/2009 de 24 de marzo cursante de fs. 1 a 3. En respuesta, BOLSER Ltda., interpuso
apelación, que fue resuelta por el Comité de Vigilancia mediante Resolución 02/2009 de 13 de
abril, declarando improbada la misma, ratificando en su integridad la Resolución 01/2009,
comunicación que se hizo conocer a BOLSER Ltda. mediante nota BBV -DSA 470/2009 en 14
de abril de 2009, cursante de fs. 4 a 6. Al respecto, observa que el contenido de las dos
Resoluciones mencionadas, aparte de ser inmotivado y carente de todo argumento legal, no
identifica a los miembros del Comité de Vigilancia que emitieron tales decisiones desde el
anonimato, mismas que sólo fueron comunicadas por las notas citadas donde se pretende dar fe
de esas determinaciones.

Refiere, que planteado el recurso incidental de inconstitucionalidad, donde se precisó las normas
cuya constitucionalidad son cuestionadas, así como preceptos constitucionales y legales que se
habrían infringido, el Gerente General de la BBV S.A., de la misma forma y mediante nota
BBV-JAL 942/2009 de 17 de julio cursante a fs. 15, comunicó a BOLSER Ltda., lo resuelto por
el Comité de Vigilancia, transcribiendo partes del acta de reunión 007/2009 de 14 de julio (fs.
201), señalando que el Comité decidió por unanimidad no considerar el recurso indirecto de
inconstitucionalidad interpuesto por BOLSER Ltda., por tratarse de un asunto ajeno a su
competencia y haber sido interpuesto contra la RA SPVS/IV/924 emitida por la
Superintendencia de Pensiones Valores y Seguros.

Ante dicha medida, BOLSER Ltda., por memorial presentado el 27 de julio de 2009 (fs. 16 y
vta.), solicitó al Comité de Vigilancia emita una decisión expresa y motivada obteniendo como
respuesta la nota BBV-GG 898/2009 de 28 de julio (fs. 17), que remite el contenido del anterior
oficio BBV-JAL 942.

En consecuencia, los hechos que fundan la acción son los siguientes: a) El Comité de Vigilancia
de la BBV S.A. negó considerar el recurso indirecto de inconstitucionalidad presentado dentro
del procedimiento administrativo antes descrito, omitiendo su deber de sustanciar este recurso de
conformidad a los arts. 59 y 62 de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC); b) La negativa de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 891
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

considerar el mencionado recurso de inconstitucionalidad no ha sido debidamente motivada; la


misma que fue ratificada ante la solicitud de BOLSER Ltda. para que se pronuncien sobre el
recurso; y c) Las comunicaciones efectuadas por el Gerente General de la BBV S.A., no
permiten conocer si las decisiones mencionadas existen y si se encuentran suscritas por los
miembros del Comité de Vigilancia de ese ente.

I.1.2. Derecho y garantía supuestamente vulnerados

Aduce que se vulneraron la garantía al “debido proceso” y el derecho a la defensa en sus


elementos integradores a recurrir a la defensa, a obtener decisiones claras, motivadas y
fundamentadas, citando al efecto los arts. 115.II de la Constitución Política del Estado (CPE), y
59 y 62 de la Ley del LTC.

I.1.3. Petitorio

Se solicita se conceda la tutela y disponga que: 1) El Comité de Vigilancia de la BBV S.A. como
encargado de la sustanciación del proceso administrativo sobre imposición de sanciones, emita
resolución expresa y fundamentada jurídicamente respecto al Recurso Indirecto de
Inconstitucionalidad presentado el 8 de julio de 2009; y 2) El Comité de Vigilancia de la BBV
S.A., notifique a BOLSER Ltda., la Resolución expresa correspondiente, observando la
identificación de sus miembros.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 8 de octubre de 2009, según consta en el acta cursante de fs


234 a 238 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de la accionante luego de ratificar la demanda, la amplió señalando: i) La negativa


del Comité de Vigilancia de la BBV S.A. a dar el trámite legal a un recurso de
inconstitucionalidad, vulnera la garantía del debido proceso, ya que sus miembros desconocieron
el derecho que franquea la Ley del Tribunal Constitucional (LTC) a hacer uso del recurso
indirecto de inconstitucionalidad, cuyo conocimiento corresponde al Tribunal Constitucional,
para cuyo efecto corresponde a las autoridades que reciben este recurso admitirlo o rechazarlo y
elevar obrados al Organo Constitucional para su consideración; ii) El 24 de marzo de 2009,
BOLSER Ltda. fue notificado con la carta BBV-DSA 390/2009, por la que se impuso sanciones
por supuestos incumplimientos al reglamento interno de registro de operaciones de la BBV S.A.;
iii) En tiempo hábil fue presentado un recurso de inconstitucionalidad, en virtud a que se
considera que la competencia para sancionar a participantes del mercado de valores, como es
BOLSER Ltda., de acuerdo a la Ley del Mercado de Valores, corresponde a la Superintendencia
de Pensiones, Valores y Seguros que actualmente es la Dirección de Mercado de Valores que
depende de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI); y, iv) La BBV S.A.
puede imponer sanciones solamente a las agencias que han suscrito un contrato y BOLSER
Ltda. al ser participante indirecto no es Agente de Bolsa, simplemente ha suscrito una
manifestación unilateral de voluntad que establece que va a cotizar sus bonos en la BBV S.A.,
pero no se somete al Reglamento de la Bolsa. Esta figura se confirma por que la Ley del
Mercado de Valores contiene un proceso sancionatorio para los participantes directos.

I.2.2. Informe de los funcionarios demandados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 892


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

El demandado Comité de Vigilancia de la BBV S.A. señaló que: a) El Mercado de Valores es un


mercado regular que vigila las actividades que se realizan dentro del mismo y que las personas
que actúan en él se sujeten a las leyes; así, el órgano que regula ese mercado es ASFI. Dentro de
ese mercado actúan varias personas entre las que están: las bolsas de valores (en Bolivia sólo
hay una), los intermediarios (agencias de bolsas) y finalmente los emisores, donde BOLSER
Ltda. es un emisor dentro del Mercado de Valores, por tanto sometido a la regulación de la
ASFI, esto definido en la Ley del Mercado de Valores. Así se encuentra previsto dentro de las
atribuciones de la ex Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros definidas en su art. 15;
b) La Ley del Mercado de Valores, otorga a las Superintendencias las facultades de aprobar los
reglamentos internos de las entidades bajo su jurisdicción, es decir, que la ASFI aprobó todos
los reglamentos que la Bolsa de Valores utiliza para registrar valores y para fiscalizar y controlar
las actividades que realizan los participantes dentro de la Bolsa, por último la facultad de la
ASFI es conocer y resolver los recursos que le sean interpuestos; sin embargo, no existe ninguna
determinación específica que establezca la posibilidad de que este ente regulador delegue
funciones a ningún ente del Mercado de Valores, esa posibilidad no está establecida en la ley,
mencionando los arts. 30, y 21 de la Ley del Mercado de Valores, según la cual las Bolsas de
Valores tienen la facultad de establecer su propio Reglamento Interno de Registro y
Operaciones, establece las condiciones bajo las cuales se van a regir las personas que realicen
actividades dentro de la Bolsa y también determina sanciones para el incumplimiento a dicha
normativa. El art 41 de la Ley del Mercado de Valores (LMV) establece la facultad de
regulación que tiene la Superintendencia sobre la Bolsa y la facultad de reclamo que tienen las
personas participantes de la misma, ante la autoridad de regulación, mencionando también el art.
56 de la Ley del Procedimiento Administrativo(LPA); c) El 17 de octubre de 1989, la ex
Comisión Nacional de Valores, autorizó a la BBV S.A. la aplicación del Reglamento vigente al
momento de imponer la sanción a la accionante y que fue aprobado mediante RA 924 SPVS/IV
y establece las siguientes situaciones: 1) Requisitos para inscribir las emisiones de valores; 2)
Obligaciones de los emisores una vez tengan inscritos valores dentro de la Bolsa; 3) La
Superintendencia no tiene ninguna función de delegación y tampoco ha delegado a la BBV S.A.
aplicar sanciones, sino que es la Ley del Mercado de Valores, la norma que permite a la Bolsa
sancionar hechos de incumplimiento a su Reglamento; 4) Es falso que no exista relación entre la
BBV S.A. y BOLSER, ya que esta última, ha inscrito en la BBV un programa de emisión de
valores llamado Bonos BOLSER en el año 2005 han presentado el 10 de octubre de igual año,
una carta de solicitud de inscripción de esos valores por la suma de medio millón de dólares
asistidos por una agencia de información que se llama Panamerican Segurity, presentando esta
nota en calidad de prueba; 5) El 23 de marzo de 2003, presentó una nueva declaración expresa
que adjunta en calidad de prueba, en razón a que mediante éstas, BOLSER se ha considerado
participante directo. Según el art. 10 del reglamento en mención señala que no existe ningún
recurso ulterior ante la BBV S.A. para recurrir decisiones del Comité de Vigilancia, pero
establece la posibilidad de que se recurra a la Superintendencia de acuerdo al art. 41 de la LMV,
situación que no se produjo. La BBV S.A. y el Comité de Vigilancia son instancias privadas que
ejercen la capacidad de decisión pero por un acuerdo entre privados (entre el emisor y el BBV
S.A.); 6) BOLSER Ltda. tenía la posibilidad de realizar un proceso administrativo y no hizo uso
de ese derecho ya que argumentó que el Comité de Vigilancia al rechazar el recurso de
inconstitucionalidad, vulneró la garantía del debido proceso cuando la BBA S.A. y el Comité no
son autoridades administrativas ni tienen competencia para denegar el recurso de
inconstitucionalidad; y 7) BOLSER Ltda. tenía el recurso de acudir ante la Superintendencia de
Pensiones Valores y Seguros para pedir la revisión de la sanción establecida por el Comité de
Vigilancia. Por tanto piden se rechace este recurso citando las SSCC 0855/2007-R y 0398/2007-
R y se impongan costas que corresponden por ley.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 893


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.2.3. Intervención del tercero interesado

Pese a su legal notificación con el Auto 5 de octubre de 2009, cursante a fs. 152 y vta., el titular
de la ASFI, como tercero interesado del proceso, no se hizo presente a la audiencia de amparo
constitucional, ni presentó documentación o escrito alguno.

I.2.4. Resolución

La Sala Civil Tercera de la Corte Superior de Distrito de Judicial ahora Tribunal de Justicia de
La Paz, constituida en Tribunal de garantías por Resolución 048/2009 de 8 de octubre, cursante
de fs. 239 vta. a 241, concedió la acción de amparo constitucional, disponiendo que el Comité
de Vigilancia de la BBV S.A., pronuncie resolución expresa y fundamentada con relación al
recurso indirecto de inconstitucionalidad formulado el 8 de julio de 2009, dando cumplimiento
al art. 62 de la LTC, con los siguientes fundamentos: i) La nota 942/2009, que fue comunicada a
la empresa accionante, sin adjuntar mayores antecedentes y sin argumento alguno, se constituye
en una transcripción de una decisión asumida por el Comité de Vigilancia de la BBV S.A., sin
sustento fáctico ni jurídico, decisión que impide conocer con certeza los motivos fácticos y de
derecho que impulsaron al Comité de Vigilancia para no considerar el recurso indirecto de
inconstitucionalidad, aspecto que la torna en irrazonable y arbitraria; y, ii) El acta de la reunión
del Comité de Vigilancia 007/2009, en el numeral “6 Varios”, sólo trata del informe emitido por
el asesor legal del ente sobre el recurso incidental de inconstitucionalidad, sin exposición de los
hechos, subsunción de normas, ni razones, asumiendo esa Comisión el no considerar el recurso
planteado, decisión que suprime no sólo una parte estructural de la Resolución cuyo
pronunciamiento es exigido por el art. 62 de la LTC, sea rechazando o admitiendo el recurso
incidental de inconstitucionalidad, sino también toma una decisión de hecho y no de derecho,
negando al accionante conocer cuáles son las razones para que se declare en uno u otro sentido.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la ley de 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de la
liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre del 2011, en el marco de la Ley de 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose Resolución dentro el plazo.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones
que se señalan seguidamente:

II.1. El Comité de Vigilancia de la BBV S.A. mediante Resolución 01/2009 de 23 de marzo,


decidió sancionar los incumplimientos de la Sociedad BOLSER Ltda., referidos a la información
de un hecho relevante y a la presentación de la documentación respaldatoria fuera del plazo
establecido al efecto, mediante una multa de cuarto rango por cada día hábil de retraso, siendo
instrumentalizada y ejecutada por el Gerente General Federico Knaudt mediante nota 390/2009
del 24 de marzo (fs. 1 a 3).

II.2. La parte accionante interpuso apelación, que fue declarada improbada mediante Resolución
02/2009 del 13 de abril de igual año, lo que fue objeto de reclamo posterior ante la ASFI,
institución que señaló: “No existiendo proceso administrativo sometido a su consideración se
devuelven los antecedentes presentados”. Ante esta situación interpone el 8 de julio, recurso
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 894
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

incidental de inconstitucionalidad, señalando las normas cuya constitucionalidad se cuestionan,


así como los preceptos constitucionales y legales considerados infringidos (fs. 7 a 14 vta.; y
146).

II.3. El Gerente General de la BBV S.A, mediante nota BBV-JAL 942/2009 del 17 de julio,
comunicó a la empresa accionante la posición del Comité de Vigilancia, transcribiendo partes
del acta de reunión 007/2009 realizada el 14 de julio de 2009, donde se decidió por unanimidad
no considerar el recurso indirecto de inconstitucionalidad interpuesto por BOLSER Ltda., por
tratarse de un asunto ajeno a su competencia y por haber sido interpuesto contra la RA
SPVS/IV/ 924, emitida por la Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros (fs. 15).

II.4. Ante esta decisión, la representante de BOLSER Ltda., por memorial de 27 de julio de
2009, solicitó a la BBV S.A. emitir una decisión expresa sobre el recurso incidental planteado;
en respuesta a la cual, la BBV S.A. mediante nota de 28 de julio del mismo mes y año, ratificó
su decisión de no considerar el recurso de inconstitucionalidad presentado (fs. 16 a 17).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia la vulneración del derecho al debido proceso, en sus elementos


integradores al derecho de recurrir a la defensa y al derecho a obtener decisiones claras,
motivadas y fundamentadas, toda vez, que dentro de un proceso sancionatorio sustanciado
contra la empresa que representa, el Comité de Vigilancia de la BBV S.A. a través de su Gerente
General, le hace conocer su decisión por unanimidad de no considerar el Recurso Indirecto de
Inconstitucionalidad que interpuso, bajo el argumento que se trata de un asunto ajeno a su
competencia. En consecuencia corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes
a fin de poder conceder o denegar la acción de amparo constitucional.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

El art. 128 de la CPE, ha previsto la acción de amparo constitucional, contra todos los actos y
omisiones ilegales o indebidos cometidos por servidores públicos o persona particular o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir los derechos reconocidos por esta
Norma Fundamental y las leyes, constituyendo una garantía jurisdiccional extraordinaria,
mediante la cual, el accionante hace posible la restitución de sus derechos y garantías
fundamentales restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión, obteniendo la
tutela y la reposición en el ejercicio de los mismos.

III.2. Principio de subsidiariedad que rige a la acción de amparo constitucional

El art. 129.I de la CPE, prevé la subsidiariedad de la acción al precisar que la acción de amparo
constitucional se interpondrá “…ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no
exista otro medio o recurso legal, para la protección inmediata de los derechos y garantías,
restringidos, suprimidos o amenazados”.

Al respecto, la jurisprudencia constitucional ha dejado establecido de manera uniforme y clara


que las acciones constitucionales deben ser presentadas cuando se han agotado los medios,
recursos o mecanismos de reclamación ante las autoridades judiciales o administrativas, que
hubieran causado lesión a derechos y garantías fundamentales. Así, la SC 1170/2010-R de 6 de
septiembre, remitiéndose a otras, y cuyo entendimiento es asumido por no ser contrario al orden
constitucional vigente, ha señalado que:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 895


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

“…la SC 0552/2003-R de 29 de abril, que: '…el amparo constitucional instituido como una
garantía constitucional para otorgar protección a derechos fundamentales, por mandato
constitucional está regido por el principio de subsidiariedad, lo que significa que no podrá ser
interpuesto mientras no se hubiera hecho uso de los recursos ordinarios o administrativos, o en
su caso cualquier otro medio de reclamación ante el particular, autoridad o tribunal que se
considere hubiese causado o esté causando el agravio, y para el caso de haberlos utilizado, los
mismos deberán ser agotados, entendiéndose por esto que se debe tener el resultado en sentido
negativo de las instancias idóneas para conocer y resolver el recurso o reclamo presentados
por el recurrente'.

En ese sentido, la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre, ha desarrollado reglas y subreglas de


aplicación al principio de subsidiariedad señalando: 'Que de ese entendimiento jurisprudencial,
se extraen las siguientes reglas y subreglas de improcedencia de amparo por subsidiariedad
cuando: 1) Las autoridades judiciales o administrativas no han tenido la posibilidad de
pronunciarse sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un medio de defensa ni ha
planteado recurso alguno, así: a) Cuando en su oportunidad y en plazo legal no se planteó un
recurso o medio de impugnación y b) Cuando no se utilizó un medio de defensa previsto en el
ordenamiento jurídico; y 2) Las autoridades judiciales o administrativas pudieron haber tenido
o tienen la posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios de defensa,
así: a) cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se daría en casos de
planteamientos extemporáneos o equivocados y b) Cuando se utilizó un medio de defensa útil y
procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo no se agotó, estando al
momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de resolución. Ambos casos,
se excluyen de la excepción al principio de subsidiaridad, que se da cuando la restricción o
supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados, ocasionen perjuicio
irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional, procede la tutela
demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de resolución".

III.3. El planteamiento de una acción tutelar en el trámite de un recurso de


inconstitucionalidad

La línea jurisprudencial antes citada ha sido ampliada en la SC 0471/2011-R de 18 de abril, al


expresar lo siguiente:

“La jurisprudencia y las consideraciones precedentes son de aplicación al presente caso,


puesto que el accionante denuncia la no remisión de las fotocopias pertinentes del recurso
indirecto de inconstitucionalidad que interpuso dentro de un recurso jerárquico …; sin
embargo, esa situación procesal del indicado incidente de inconstitucionalidad -hoy acción de
inconstitucionalidad concreta-, que esencialmente es un recurso o acción constitucional, no
debió ser reclamada a través de una acción de amparo constitucional, que es también una
acción constitucional, de defensa de derechos fundamentales; pues ello no sólo que atenta a la
naturaleza jurídica y finalidad de la acción de amparo constitucional, sino que también podría
provocar una cadena de recursos o acciones tras otra, atentando así a la efectividad de la
justicia constitucional.

En todo caso, la parte accionante que solicitó se promueva el incidente de inconstitucionalidad,


debió reclamar en esa instancia administrativa el cumplimiento del procedimiento legal
establecido, y en su defecto, debió acudir en queja ante la Comisión de Admisión de este
Tribunal haciendo notar tal situación procesal; empero, no actuó de esa manera, pues pese ha
haber solicitado se promueva el incidente … Es decir, que no actuó conforme correspondía,
mucho menos acudió a este Tribunal denunciando ese extremo a objeto de que se pida informe
y/o se conmine lo que corresponde para regularizar el procedimiento…”.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 896
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

III.4. Análisis del caso concreto

Con relación al recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad que refiere la accionante,


se evidencia que el Gerente General de la BBV S.A., en la nota 942/2009, sin expresar
argumento alguno se limitó a transcribir y hacer conocer la decisión asumida por el Comité de
Vigilancia en reunión de 14 de julio de 2008, en sentido de no considerar el recurso incidental
de inconstitucionalidad planteado por BOLSER Ltda., por tratarse de un asunto ajeno a su
competencia, acto que se constituye en una mera negación sin sustento jurídico, en el que se
obvió cumplir con el procedimiento establecido en el art. 62 de la LTC.

De lo brevemente expuesto, se concluye que mediante la acción de amparo constitucional


planteada, se pretende reclamar el inicio y cumplimiento del trámite del recurso incidental de
inconstitucionalidad que planteó BOLSER Ltda., el 08 de julio de 2009, ante el Comité de
Vigilancia de la BBV S.A., dentro del proceso administrativo, en el que se aplicó a la empresa
accionante una multa de cuarto rango, en aplicación de la RA SPVS/IV/ 924 de la
Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros (cuya inconstitucionalidad se alega).

Al respecto, se halla definido por los arts. 128 y 132 de la CPE, que la acción de amparo
constitucional, por su naturaleza y alcance es una acción tutelar que tiene por finalidad proteger
los derechos constitucionales, por lo cual en autos, no correspondía que a través de la presente
acción de amparo constitucional, se reclame el trámite del Recurso Incidental de
Inconstitucionalidad mencionado, que tiene otra naturaleza y objeto, que es el de excluir del
ordenamiento legal vigente la norma impugnada de inconstitucional, como se ha señalado en los
Fundamentos Jurídicos III.2 y III.3, por cuanto, el acceder a tutelar lo solicitado por la
accionante, desnaturalizaría el objeto de la acción de amparo constitucional, cuya naturaleza
jurídica es la protección de derechos y garantías y no así, el regularizar y corregir procedimiento
de otra acción constitucional.

Es así, que conforme a los antecedentes y fundamentos expuestos, una vez que el Comité de
Vigilancia de la BBV S.A. omitió pronunciarse sobre la acción de inconstitucionalidad referida,
pese a la insistencia de la ahora accionante, correspondía que la misma en consecuencia, acuda
en queja ante la Comisión de Admisión de este Tribunal haciendo notar tal omisión, para que
esta instancia pida informe y/o conmine a ese Comité el cumplimiento del procedimiento legal e
inexcusable prescrito por el art. 62 de la LTC, sin embargo no obró de esa forma, pretendiendo
erróneamente a través de la presente acción de amparo constitucional, que se regularice el
trámite de la acción de inconstitucionalidad antes planteada, lo que determina que no se conceda
la tutela que solicita.

De acuerdo a lo expuesto, el Tribunal de garantías, al conceder la acción de amparo


constitucional, no compulsó debidamente los antecedentes del caso ni dio correcta aplicación al
art. 128 de la CPE.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud a lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; resuelve en revisión:
REVOCAR la Resolución 048/2009 de 8 de octubre, cursante de fs. 239 a 241, pronunciada por
la Sala Civil Tercera de la Corte Superior del Distrito Judicial - ahora Tribunal Departamental de
Justicia - de La Paz; y en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 897


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO
INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0099/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA


Mag. Relatora: Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi
Acción de amparo constitucional
Expedientes: 2009-20558-42-AAC
2009-20742-42-AAC (acumulado)
Departamento: Chuquisaca

En revisión las Resoluciones 278/2009 de 18 de septiembre, cursante de fs. 335 a 339 y


vta., y 319/2009 de 20 de octubre, que corre de fs. 364 a 368 vta., pronunciadas dentro de
las acciones de amparo constitucional interpuestas por Freddy Luis Heinrich Balcázar y
René Navajas Mogro contra Teófilo Tarquino Mújica, Ángel Irusta Pérez y José Luis
Baptista Morales, Ministros de la Sala Penal Primera de la Corte Suprema -ahora
Tribunal Supremo- de Justicia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Expediente 2009-20558-42-AAC

I.1.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 10 de septiembre de 2009, cursante de fs. 257 a 270 vta., Freddy
Luis Heinrich Balcázar, expresa los siguientes fundamentos:

I.1.1. 1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público y la Empresa Nacional de
Ferrocarriles (ENFE), por la presunta comisión de los delitos de contratos lesivos al Estado,
conducta antieconómica y otros, mediante Auto de Vista 110/2004 de 9 de marzo, se revocó la
Sentencia condenatoria dictada en su contra como miembro del Directorio de ENFE,
absolviéndolo, en aplicación del art. 244 inc. 1) del Decreto Ley (DL) 10426 de 23 de agosto de
1972, sin costas, por falta de fundamentos jurídicos.

Contra el citado Auto de Vista, ENFE planteó recurso de casación, el cual radicó ante la Sala
Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia a cargo de los Ministros ahora demandados,
instancia que dictó el Auto Supremo 339 de 8 de junio de 2009, omitiendo pronunciarse sobre
los puntos demandados en su memorial de 25 de noviembre de 2005, entre ellos, que la abogada
Mary Elizabeth Carrasco Condarco no contaba con poder notarial, especial y suficiente que le
faculte a presentar el recurso de alzada en representación de la citada Empresa, el que podía ser
ratificado únicamente por el nuevo Presidente del Directorio de ENFE Residual, Guillermo
Wálter Rengel Machicado, quien no lo hizo; y que pese a que la apelante tampoco citó los
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 898
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

supuestos casos de violación a la ley sustantiva; no exigieron la especificación de los motivos,


con cita de la ley o leyes procesales cuya inobservancia se impugna, o de leyes sustantivas, o de
fondo cuya violación se acusa, indicando en qué consistía el quebrantamiento de las primeras y
la violación de las segundas.

En consecuencia, los Ministros demandados pronunciaron su fallo sin una debida


fundamentación y motivación, deliberando en el fondo de manera ultra petita, vulnerando el
principio de congruencia, porque, del contenido del mismo, se evidencia una ausencia total de
relación fáctica, así como de fundamentación legal, incumpliendo la obligación de que la parte
resolutiva sea armónica con la considerativa. Omitieron igualmente pronunciarse sobre la
extinción de la acción penal por duración máxima del proceso, ignorando el requerimiento fiscal
y su impugnación, tampoco subsanaron la falta de notificación con el Auto Supremo 459 de 16
de diciembre de 2008, que declaró no haber lugar a la extinción de la acción penal contra los
procesados, dado que figura una supuesta diligencia a “Freddy Enrich Alcázar” y no cuenta con
firma de ningún Oficial de Diligencias ni de otro funcionario judicial, por lo tanto, no surte
efecto alguno porque nunca tuvo conocimiento de pronunciamiento alguno sobre la citada
extinción.

No obstante lo señalado, sin fundamentación alguna, lo sancionaron de manera incomprensible


incrementando la pena en su caso, pese a que no se demostró que su persona hubiere celebrado
contrato lesivo alguno, sino que solamente intervino en la aprobación de pliegos de
especificaciones para una convocatoria de licitación pública, hecho distinto a la celebración de
un contrato, dado que durante el tiempo de su gestión, el Directorio de ENFE, actuó en base a
informes técnicos, jurídicos y económicos evacuados por la Unidad Técnica Operativa y la
Gerencia Comercial, por lo tanto, dichos profesionales son responsables por los informes y
documentos que suscribieron, demostrando de esa manera que la culpabilidad no es atribuible a
su persona como tampoco a los miembros del Directorio de esa época, situación que la Sala
Penal Tercera de la “Corte Superior del Distrito Judicial” de La Paz, reconoció y por ese motivo
revocó la sentencia condenatoria dictada en primera instancia, declarando en su favor, sentencia
absolutoria, máxime si en materia penal no existe la figura de responsabilidad solidaria y
mancomunada por cuanto los delitos son intuito personae, extremo que se encuentra normado en
el art. 16 del Estatuto Orgánico de ENFE, al referirse a la responsabilidad del Directorio
disponiendo que “con excepción del Gerente General, los miembros del Directorio tienen
responsabilidad solidaria y mancomunada por resoluciones que adopten con relación a la
Empresa (de orden civil)”, la que en el caso, estaría referida a la aprobación de la Resolución de
Directorio 051/96 de 26 de agosto de 1996, que en su parte resolutiva señala: “Aprobar los
pliegos de especificaciones para la convocatoria a licitación pública…” y en el artículo segundo
dispone que: “se encomienda a la Presidencia Ejecutiva (que no es el Presidente del Directorio,
aunque se trate de la misma persona pero con funciones y atribuciones diferentes) y Gerencia
General la venta de los bienes inmuebles enumerados en el artículo precedente a través del
proceso de licitación pública EN FIEL CUMPLIMIENTO DE LAS DISPOSICIONES
LEGALES Y REGLAMENTOS VIGENTES”, sin embargo, dicha adjudicación al haber sido
dejada sin efecto, fue revertida a su propietario y, no surtió ningún efecto legal.

I.1.1.2. Derechos y principios supuestamente vulnerados

Señala la vulneración de sus derechos al debido proceso, a la motivación, fundamentación y


exhaustividad de los fallos, a la defensa y de los principios a la seguridad jurídica e igualdad;
citando al efecto los arts. 14.I, 115, 116, 119.II y 178.I de la Constitución Política del Estado
(CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 899


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

I.1.1.3. Petitorio

Solicita que se conceda la tutela en su favor y en consecuencia: a) Se deje sin efecto ni valor
legal alguno el Auto Supremo 339 de 8 de junio de 2009, dictado por los demandados; b) Se
ordene a los Ministros de la Sala Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia que dicten
nuevo auto supremo debidamente fundamentado y motivado; y, c) Sea con costas, daños y
perjuicios.

I.1.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

En audiencia pública celebrada el 18 de septiembre de 2009, según consta en el acta cursante, de


fs. 328 a 334, se produjeron los siguientes actuados:

I.1.2.1. Ratificación de la acción

El abogado y representante legal de Freddy Luis Heinrich Balcázar ratificó los términos de su
memorial de demanda.

I.1.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los demandados Teófilo Tarquino Mújica, Ángel Irusta Pérez y José Luis Baptista Morales,
presentaron informe escrito que cursa de fs. 317 a 320, en el que argumentaron lo siguiente: 1)
El proceso penal se originó por la transferencia de varios bienes inmuebles de propiedad de
ENFE, sustanciado contra personas que en su condición de funcionarios y empleados de esa
Empresa, junto con ciudadanos particulares, fueron autores de esas enajenaciones; 2) La
Sentencia de primera instancia declaró al ahora accionante autor del delito de contratos lesivos
al Estado y le impuso la pena de tres años de reclusión, más el pago del daño civil y costas al
Estado; en apelación, el Auto de Vista 110, revocó el fallo de primera instancia y dictó
Sentencia absolutoria; 3) En cuanto a la falta de personería de la abogada Mary Elizabeth
Carrasco Condarco, indican que en tanto no exista revocación expresa que conste en el
expediente, la personería es legal; 4) Respecto a la responsabilidad del actor en los hechos
juzgados, éste pretende que a través de esta acción se realice una nueva valoración de la prueba,
sin embargo, no precisó que medio de prueba hubiera sido indebidamente valorado u omitido
por el Tribunal de Casación; 5) En el Auto Supremo emitido, respecto a la valoración de la
prueba, se señaló que fue desarrollado con mejor criterio por la Juez a quo, calificando
correctamente la conducta del actor al tipo penal previsto en el art. 221 del Código sustantivo, en
relación a la parte in fine del párrafo primero del art. 20 del Código Penal (CP), por tanto no es
evidente que se encuentre exento de responsabilidad; 6) En relación a la supuesta omisión de
pronunciamiento de la extinción de la acción penal por duración máxima del proceso y a la
aparente falta de notificación con la Resolución de rechazo a dicha excepción, se emitió el Auto
Supremo 459, declarando no haber lugar a la extinción de la acción penal; y, 7) Respecto a la
falta de fundamentación del Auto Supremo impugnado, no es evidente, porque Resolución se
encuentra debidamente motivada y es congruente con los puntos recurridos en casación, y al
considerar que no cometieron acto ilegal que restringió o vulneró los derechos reclamados,
solicitan denegar la tutela impetrada.

I.1.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Civil Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de


Chuquisaca, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 278/2009 de 18 de
septiembre, cursante de fs. 335 a 339 vta., por la que concedió parcialmente la acción de
amparo constitucional, dejando sin efecto ni valor alguno el Auto Supremo 339, sólo y
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 900
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

exclusivamente en relación al accionante, debiendo pronunciar nuevo auto supremo que


contenga las razones y fundamente debidamente el por qué del incremento de la sanción
impuesta. Bajo los siguientes argumentos: i) En cuanto a la personería de la recurrente de
casación a nombre de ENFE, resulta inatendible por un Tribunal de garantías, porque no es un
recurso casacional y respecto al pronunciamiento “extra petita”, no se evidencia prueba de ello
que permita emitir juicio de valor; ii) En relación a la falta de pronunciamiento de la extinción
de la acción penal, no es evidente, porque cursa en el expediente el Auto Supremo, emitido por
la Sala Penal Primera, prueba que ha sido presentada por el propio accionante; y en cuanto a una
supuesta falta o inadecuada notificación, en aplicación al principio de subsidiariedad el Tribunal
de garantías carece de competencia para revisar un acto que no fue reclamado oportunamente;
iii) El accionante acusa a las autoridades demandadas de haber declarado subsistente la
Sentencia de primer grado sin la debida fundamentación; sin embargo, luego de revisado el texto
del impugnado Auto Supremo 339, se advierte que se encuentra fundamentado toda vez que
analiza la conducta del actor; iv) Respecto de si la conducta del accionante constituye o no delito
de contratos lesivos al Estado, es atribución exclusiva de los tribunales ordinarios; y, v)
Finalmente acusa a los Ministros demandados de haber incrementado la pena, sin motivar ni
fundamentar de manera alguna las razones, rompiendo la armonía que debe existir entre la parte
considerativa y la resolutiva, siendo evidente esta acusación por cuanto no se ha fundamentado
cual es la razón para incrementar la sanción de los tres años de reclusión originalmente
impuestos por la Sentencia de primer grado, a los cinco años ahora impuestos por el Auto
Supremo impugnado, concluyendo que sí se ha quebrado el principio de congruencia interna que
debe contar toda resolución judicial, correspondiendo conceder la tutela solo en esta parte.

I.2. Expediente 2009-20742-42-AAC

I.2.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 8 de octubre de 2009, cursante de fs. 648 a 664, René Navajas
Mogro manifestó lo siguiente:

I.2.1.1. Hechos que motivan la acción

Como consecuencia de un proceso penal que le siguió el Ministerio Público y ENFE por la
presunta comisión de los delitos de contratos lesivos al Estado, conducta antieconómica y otros,
la Jueza Cuarta de Partido en lo Penal y Liquidadora, dictó la Sentencia 40/2002, declarando a
los miembros del Directorio del cual formaba parte su persona, autores del delito de contratos
lesivos al Estado, imponiéndoles a cada uno la pena de tres años de reclusión, pago de daño civil
y costas al Estado, absolviéndolos de pena y culpa por el delito de conducta antieconómica por
existir prueba semiplena.

Refiere que apelaron de dicha Sentencia, y la Sala Penal Tercera de la Corte Superior del
Distrito Judicial de La Paz, pronunció el Auto de Vista 110/2004 de 9 de marzo, que revocó la
Sentencia condenatoria, dictándose en su favor Sentencia absolutoria para todos los miembros
del Directorio, Resolución que fue recurrida de casación tanto por ENFE como por los
procesados Germán Esteban Medrano Kreidler, Raúl Enrique Condarco Zenteno, Julio Porras
Calderón, Edwin Carvallo Zambrana y Zulema Yáñez Rodríguez, recurso que radicó en la Sala
Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia, resolviendo el mismo a través del Auto Supremo
339, que declaró infundados los recursos de casación interpuesto por los procesados y casó el
Auto de Vista, declarando subsistente la Sentencia de primera instancia sin ninguna
fundamentación ni motivación, y en cuanto a los miembros del Directorio de ENFE, dispuso se
les incremente la pena a cinco años de privación de libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 901


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Alega que, el Auto Supremo 339, lo responsabiliza penalmente de la comisión del delito de
contratos lesivos al Estado, pese a la inexistencia de fundamento legal que demuestre que su
conducta se adecuó al tipo penal que se le atribuye, máxime si no se puede sustentar una
conducta en un aspecto solidario que nada tiene que ver con la acción punible que cometa otra
persona, de modo que no se pudo establecer acto alguno que demuestre la descripción de los
elementos esenciales de los tipos penales por los que fue juzgado; sin embargo, los Ministros
demandados, incrementaron el quantum de la pena, omitiendo señalar, las razones por las cuales
la pena impuesta en primera instancia era inadecuada o insuficiente, así como los motivos por
los cuales la pena a aplicarse a su persona es de cinco años, constituyéndose dicho Auto
Supremo en un acto ilegal y atentatorio a sus derechos y garantías constitucionales,
incumpliendo el deber flagrante de motivación de las resoluciones judiciales.

I.2.1.2. Derechos, garantía y principios supuestamente vulnerados

Señala la vulneración de sus derechos al debido proceso, a la motivación, fundamentación y


exhaustividad de los fallos, a la defensa, y de los principios a la seguridad jurídica e igualdad;
citando al efecto los arts. 115, 116, 119.II, 178.I y 14.I de la CPE; 8 de la Convención
Americana de Derechos Humanos; y, 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos

I.2.1.3. Petitorio

Solicita que se conceda la tutela en su favor y en consecuencia: a) Se deje sin efecto ni valor
legal alguno el Auto Supremo 339 de 8 de junio de 2009, dictado por los demandados; b) Se
ordene a los Ministros de la Sala Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia que dicten
nuevo auto supremo debidamente fundamentado y motivado; y, c) Sea con costas, daños y
perjuicios.

I.2.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 20 de octubre de 2009, conforme consta en el acta cursante de


fs. 736 a 738, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.2.1. Ratificación de la acción

El abogado y representante legal de René Navajas Mogro ratificó los términos de su memorial
de demanda, y concluyó reiterando se conceda la acción de amparo y se deje sin efecto el Auto
Supremo 339.

I.2.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los Ministros demandados, presentaron informe escrito cursante de fs. 350 a 355, en el que
manifestaron lo siguiente: a) El proceso penal se originó por la transferencia de varios bienes
inmuebles de propiedad de ENFE, sustanciado contra personas que en su condición de
funcionarios y empleados de esa Empresa, junto con ciudadanos particulares, fueron autores de
esas enajenaciones; b) La Sentencia de primera instancia declaró al ahora accionante autor del
delito de contratos lesivos al Estado y le impuso la pena de tres años de reclusión, más el pago
del daño civil y costas al Estado; en apelación, el Auto de Vista 110, revocó el fallo de primera
instancia y dictó Sentencia absolutoria; c) Respecto a la falta de fundamentación del Auto
Supremo impugnado, resulta innecesario efectuar mayores consideraciones, debido al carácter
vinculante de las resoluciones emitidas en acciones de amparo constitucional y debido a que un
pronunciamiento distinto haría inaplicable e ineficaz el emitido con anterioridad por el Tribunal
de amparo, dentro de la acción tutelar interpuesta por Freddy Heinrich Balcázar; d) En el Auto
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 902
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Supremo emitido, respecto a la valoración de la prueba, se señalo que fue desarrollado con
mejor criterio por la Juez a quo, calificando correctamente la conducta del actor al tipo penal
previsto en el art. 221, en relación con la última parte del párrafo primero del art. 20 del CP, por
tanto no es evidente que se encuentre exento de responsabilidad penal.

I.2.2.3. Resolución

La Sala Civil Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial de Chuquisaca, constituida en
Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 319/2009 de 20 de octubre, cursante de fs. 364 a
368 vta., por la que concedió la tutela solicitada, dejando sin efecto el Auto Supremo 339 de 8
de junio de 2009, sólo con relación a René Navajas Mogro, disponiendo pronunciar nuevo auto
supremo que contenga las razones legales del incremento de la sanción impuesta al accionante.
Señala como fundamento lo siguiente: a) Si en casación se decidió sancionar injustamente a una
persona porque supuestamente hubiere incurrido en la comisión del delito sancionado por el art.
221 del CP, lo mínimo que debían hacer los Ministros demandados, era fundamentar y explicar,
si se incurrió en ese ilícito por dolo o por culpa; sin embargo, el Auto Supremo 339, viola el
principio de legalidad en cuanto a la tipicidad de la conducta; b) No demuestran ni fundamentan
en qué consiste la contravención al art. 221 del CP, no basta señalar, que se ha infringido, sino
que deben explicar y fundamentar como se ha violado dicha norma legal; y, c) Incrementaron la
pena sin motivar ni fundamentar las razones para tal decisión, rompiendo la armonía que debe
existir entre la parte considerativa y resolutiva, extremo que ya fue evidenciado y corroborado
en la acción de amparo interpuesta por Freddy Heinrich Balcazar.

I.3 Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011, la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

I.4. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

No obstante que el expediente 2009-20558-42-AAC, se sorteo el 28 de febrero de 2012 y el


expediente 2009-20742-42-AAC, el 20 de marzo del mismo año, estos fueron acumulados de
acuerdo a lo dispuesto en el AC 0008/2012 CA/S-L de 3 de abril, con el objeto de que sean
considerados en una sola resolución por advertirse su conexitud y relación directa, en función a
los principios de economía procesal y concentración.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en los expedientes se establecen
las siguientes conclusiones:

II.1. Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público y ENFE contra varias personas
por los delitos de contratos lesivos al estado, conducta antieconómica y asociación delictuosa, la
Juez Cuarto de Partido en lo Penal y Liquidador del Distrito Judicial de La Paz, pronunció la
Sentencia 40/2002 de 19 de abril, declarando a los miembros del Directorio: René Navajas
Mogro, Luis Ramiro Arce Salcedo, Roberto Gisbert Bermúdez, Ricardo Arcil Menacho Ríos y
Freddy Luis Heinrich Bálcazar, autores del delito de contratos lesivos al Estado,
imponiéndoles a cada uno la pena de tres años de reclusión, más el pago de daño civil y costas al
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 903
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Estado (expediente 20558-AAC fs. 141 y expediente 20742-AAC fs. 519), al mismo tiempo los
absuelve de pena y culpa por el delito de conducta antieconómica por existir sólo prueba
semiplena (expediente 20558-AAC fs. 5 a 144) y (expediente 20742-AAC fs. 383 a 522).

II.2. Mediante Auto de Vista 110/2004 de 9 de marzo, la Sala Penal Tercera de la Corte
Superior del Distrito Judicial de La Paz, revoca la Sentencia condenatoria dictada contra los
miembros del Directorio, decretándose en su favor Sentencia absolutoria (expediente 20558-
AAC fs. 145 a 159 vta.) y (expediente 20742-AAC 148 a 162 vta.).

II.3. El 18 de mayo de 2005, Edith Romero de González, Fiscal Adjunto de la Fiscalía General,
requiere para que los Ministros de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, como
consecuencia de los recursos de nulidad y casación interpuestos tanto por la representante de
ENFE como por los acusados contra el Auto de Vista 110/2004, proseguir con la tramitación de
la presente causa hasta su conclusión, declarando de oficio no haber lugar a la extinción de la
acción penal para todos lo procesados y casar en parte el Auto de Vista recurrido, declarándolos
autores y culpables del delito de contratos lesivos al estado y a los miembros del Directorio en
grado de complicidad (expediente 20558-AAC fs. 160 a 174) y (expediente 20742-AAC fs. 549
a 563).

II.4. Freddy Luis Heinrich Balcázar, por memorial de 25 de noviembre de 2005, se apersonó
ante la Sala Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia, impugnando el requerimiento
solicitado por la Fiscal Adjunto de la Fiscalía General y pide se dicte resolución apartándose del
mismo y confirmando el Auto de Vista impugnado (expediente 20558-AAC fs. 175 a 180) y
(expediente 20742-AAC fs. 564 a 569).

II.5. Por Auto Supremo 459 de 16 de diciembre de 2008, la Sala Penal Primera de la Corte
Suprema de Justicia, de oficio declara no haber lugar a la extinción de la acción penal instaurada
contra los procesados, Resolución notificada a “Freddy Einrich Álcazar” el 19 del mismo mes y
año, mediante cedulon fijado en el tablero de la Secretaría de Cámara de la Sala Penal Primera
de la Corte Suprema (expediente 20558-AAC fs. 233 a 239) y (expediente 20742-AAC fs. 583 a
587).

II.6. Por memorial de 12 de marzo de 2009, dirigido a la Sala Penal de la Corte Suprema de
Justicia, Raúl Enrique Condarco Zenteno, solicita se declare la prescripción de la acción penal
(expediente 20558-AAC fs. 192 a 195) y (expediente 20742-AAC fs. 598 a 601).

II.7. Mirna Arancibia Belaunde, Fiscal de Recursos de la Fiscalía General, el 20 de marzo de


2009, responde al incidente, pidiendo que de oficio se declare no haber lugar a la prescripción de
la acción penal solicitada por Raúl Enrique Condarco Zenteno. El Presidente Ejecutivo a.i. de
ENFE, rechaza la solicitud de prescripción de la acción penal y propugna requerimiento fiscal
(expediente 20558-AAC fs. 208 a 209) y (expediente 20742-AAC fs. 606 a 609).

II.8. Mediante Auto Supremo 269 de 27 de abril de 2009, la Sala Penal Primera de la Corte
Suprema de Justicia, de acuerdo con el requerimiento fiscal, rechaza la excepción de
prescripción formulada por el imputado Raúl Enrique Condarco Zenteno (expediente 20558-
AAC fs. 212 a 214 vta.) y (expediente 20742-AAC fs. 618 a 620 vta.).

II.9. La Sala Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia, mediante Auto Supremo 339 de 8
de junio de 2009, declararon infundados los recursos de casación interpuesto por los procesados
Germán Esteban Medrano Kreidler, Raúl Enrique Condarco Zenteno y Zulema Yáñez
Rodríguez y en mérito a los recursos de casación formulados por ENFE, Julio Porras Calderón y
Edwin Carballo Zambrana, casaron el Auto de Vista impugnado y declararon subsistentes la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 904
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Sentencia de primera instancia, y en lo que respecta a la condena de los miembros del Directorio
en el que se encuentran los accionantes Freddy Luis Heinrich Balcázar y René Navajas Mogro,
se incrementó la pena a cinco años de privación de libertad (expediente 20558-AAC fs. 240 a
252) y (expediente 20742-AAC fs. 628 a 640).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes alegan que las autoridades judiciales demandadas, vulneraron sus derechos,
dado que dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público y ENFE, en apelación se
dictó Sentencia absolutoria a su favor; sin embargo, en casación los Ministros demandados
emitieron el Auto Supremo 339 con los siguientes vicios: 1) No constataron la falta de
personería de la recurrente de casación, actuando ultra petita al resolver el recurso planteado; 2)
El Auto Supremo impugnado carece de fundamentación y motivación, omitió pronunciarse
sobre la extinción de la acción solicitada y su ilegal notificación, -con el advertido de que estos
dos puntos corresponden al expediente 20558-AAC-; 3) Prescindieron exigir la especificación
de los motivos, con cita de la ley o leyes cuya inobservancia se impugnaba, o de las leyes
sustantivas cuya violación se acusaba; y 4) La determinación asumida carece de congruencia,
por cuanto en relación a los accionantes se evidencia ausencia total de relación fáctica, así como
de fundamentación legal, careciendo de elementos jurídicos que justifiquen el incremento de la
pena impuesta.

Precisada la problemática planteada, corresponde determinar si existió vulneración de los


derechos fundamentales y garantías constitucionales invocadas, a objeto de conceder o denegar
la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional: Naturaleza jurídica y alcance

La acción de amparo constitucional, comprendida en el art. 128 de la CPE, está instituida por
mandato constitucional, como una acción de defensa contra actos u omisiones ilegales o
indebidos de los servidores públicos o de persona individual o colectiva, que restrinjan,
supriman o amenacen restringir o suprimir derechos fundamentales y garantías constitucionales.

Se constituye entonces en una de las acciones de defensa más amplia en cuanto al alcance de su
ámbito de tutela y protección de derechos, rigiendo para su interposición, los principios de
inmediatez y subsidiariedad, conforme lo establece el art. 129 de la Ley Fundamental;
denotándose de la naturaleza de esta acción su objeto de protección y resguardo de derechos en
el marco de los valores y principios ético-morales establecidos en la Constitución Política del
Estado, contribuyendo desde la justicia constitucional a efectivizar y materializar esos valores y
principios para una vida armoniosa, con equidad, igualdad de oportunidades y dignidad, entre
otros valores, en los que se sustenta el Estado Plurinacional y que son parte de la sociedad
plural.

A su vez, cuenta con determinadas autorestricciones emergentes precisamente de su finalidad


como acción extraordinaria de protección de derechos fundamentales y garantías
constitucionales, mismas que tienen por objeto evitar que el amparo constitucional sea
desvirtuado en su naturaleza jurídica y alcance.

III.2. Respecto a la personería de la recurrente de casación y la exigencia de especificación


de motivos del recurso

III.2.1. El amparo constitucional y la labor de la interpretación de la legalidad ordinaria

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 905


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Conforme a la naturaleza jurídica y alcance de la acción de amparo constitucional, la


jurisprudencia constitucional asumió como uno de los criterios de autorestricción la revisión de
la interpretación de la legalidad ordinaria cuando no concurran los presupuestos para ello. Así
las SSCC 1846/2004-R, 1917/2004-R y 0718/2005-R, refieren que si bien es evidente que la
interpretación de la legalidad ordinaria corresponde a la jurisdicción ordinaria dentro de sus
facultades y atribuciones; sin embargo, compete a la jurisdicción constitucional verificar si en
dicha labor de interpretación no se quebrantaron los principios informadores del ordenamiento
jurídico y a los que por mandato constitucional se encuentra regida tanto la jurisdicción
ordinaria, cuanto la potestad de impartir justicia. Ello implica a su vez, que para que la
jurisdicción constitucional pueda cumplir con esa tarea de verificación, es necesario que quien
acude al amparo constitucional invocando la protección de sus derechos, señale los valores
supremos y principios fundamentales presuntamente vulnerados por la jurisdicción ordinaria en
su labor de interpretación de normas, precisando además cuáles principios o criterios
interpretativos no fueron empleados o se omitieron y en su caso los criterios de interpretación
que debieron ser empleados, derivando a su vez en los derechos presuntamente lesionados con la
labor interpretativa.

Conforme a lo indicado, existen determinadas condiciones para que se abra la tarea de


verificación de la jurisdicción constitucional respecto a la labor de interpretación de la legalidad
ordinaria, presupuestos sin los cuales esta acción de defensa es inviable, como bien lo establece
la SC 0792/2005-R de 18 de julio, al indicar: “…si el recurrente no expresa de manera
adecuada los fundamentos jurídicos que sustentan su pretensión; por lo mismo, no identifica
con claridad y precisión los principios y criterio interpretativos que no fueron aplicados o
fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y consiguiente
aplicación de las normas de la legislación ordinaria, si no identifica con precisión los valores
supremos y principios fundamentales vulnerados por el intérprete de la legislación ordinaria al
momento de desarrollar su labor interpretativa; la jurisdicción constitucional no puede
conceder la tutela solicitada, al contrario deberá denegarla”.

III.2.2. El accionante Freddy Luis Heinrich Balcázar alega, como parte de su acción de amparo,
que los demandados omitieron considerar que el recurso de casación, fue interpuesto por Mary
Elizabeth Carrasco Condarco sin contar con el poder notarial especial y suficiente, por cuanto la
única persona facultada que podía ratificar el poder notarial otorgado por el anterior Presidente
del Directorio de ENFE Residual, era el nuevo Presidente, Guillermo Wálter Rengel Machicado
“y él no lo hizo”, por tanto -sostiene el accionante- el poder notarial invocado por la recurrente
de casación, carecía de mandato. De otro lado, sostiene que la referida recurrente de casación, no
citó los supuestos casos de violación a la ley sustantiva, por lo que los Ministros demandados
pronunciaron el Auto Supremo 339, sin advertir que el recurso de casación no era una
controversia entre partes, siendo la cuestión de responsabilidad entre la ley y sus infractores, por
ende -concluye el accionante- la responsabilidad no era atribuible a su persona, como tampoco al
Directorio de esa época, ya que actuaron en base a informes técnicos, jurídicos y económicos,
siendo los emisores de dichos informes los responsables en aplicación de los arts. 38 de la Ley
de Administración y Control gubernamental (LACG) y 65 del DS 23318-A, por ello mismo se
dictó Sentencia absolutoria a su favor en aplicación “del numeral 1) del art. 244 del D.L. 10426”
por cuanto en materia penal no existe la figura de responsabilidad solidaria y mancomunada,
dado que los delitos son intuito personae, no pudiendo aplicarse la responsabilidad solidaria a su
caso.

De la relación efectuada, se evidencia que el accionante cuestiona la interpretación normativa


efectuada por las autoridades judiciales demandadas y en base a la cual aplicaron las normas y
determinaciones respecto a la vigencia de la personería de la recurrente de casación, admitiendo
de acuerdo a ello dicho recurso sin requerir una ratificación del nuevo Presidente del Directorio
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 906
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

de ENFE Residual, y de otro lado cuestiona la normativa que correspondía al caso sobre su
responsabilidad penal como procesado; empero, del contenido de su demanda de amparo
constitucional, no se advierte que hubiese expresado de forma precisa y adecuada los
fundamentos que sustenten su pretensión, habida cuenta que se limita a impugnar la
interpretación efectuada y consecuente aplicación de normas, sin identificar ni los principios, ni
los criterios interpretativos que hubiesen sido omitidos por los Ministros demandados al admitir
el recurso de casación interpuesto por la apoderada de ENFE.

De otro lado, tampoco identifica ni desarrolla cuáles fueron los elementos de los valores
supremos y principios fundamentales que hubiesen sido desconocidos y por consiguiente la
vulneración de derechos fundamentales y garantías constitucionales en la que hubiese derivado
la interpretación y aplicación de normas efectuada por los demandados, circunstancias éstas que
imposibilitan la tutela solicitada sobre estos dos puntos, correspondiendo en consecuencia
denegarla.

III.3. En cuanto a la motivación y fundamentación de la solicitud de extinción de la acción


y su notificación

El accionante Freddy Luis Heinrich Bálcazar demanda también que el Auto Supremo ahora
impugnado, atenta contra sus derechos al omitir pronunciarse sobre la extinción de la acción
penal por duración máxima del proceso, máxime si nunca fue notificado con resolución alguna
al respecto.

De la revisión de los antecedentes presentados y que cursan en el expediente, se evidencia que


por Auto Supremo 459 de 16 de diciembre de 2008, la Sala Penal Primera de la entonces Corte
Suprema de Justicia, de oficio declaró no haber lugar a la extinción de la acción penal instaurada
contra los procesados (expediente 20558-AAC fs. 233 a 237), ello implica que por una parte no
se advierte cuál la omisión extrañada por el accionante respecto a la extinción de la acción penal,
habida cuenta que con anterioridad a la emisión del Auto Supremo 339 ahora impugnado, la
Corte Suprema de Justicia ya se había pronunciado respecto a la extinción de la acción penal, lo
que a su vez conlleva que de otra parte, no pueda efectuarse pronunciamiento alguno sobre el
fondo de una cuestión ya resuelta.

De otro lado, se constata también que el citado Auto Supremo 459, se notificó a “Freddy Enrich
Alcázar”, el 19 de diciembre de 2008, mediante cedulón fijado en el tablero de la Secretaría de
Cámara de la Sala Penal Primera de la Corte Suprema de Justicia (expediente 20558-AAC fs.
239 vta.). Al respecto, del contenido de la demanda de amparo, se evidencia que el accionante
reconoce la existencia y conocimiento de esa notificación, pero como el mismo aduce, no la da
por válida al estar dirigida a “Freddy Enrich Alcázar” y no a su persona Freddy Heinrich
Balcázar; sin embargo, el procesado no toma en cuenta que si la notificación cumple su
finalidad, cual es la de poner en conocimiento de la parte determinado actuado procesal, la
misma se considera como válida, situación que se presentaría en el caso concreto, ya que
conforme las propias afirmaciones de la parte accionante, tuvo conocimiento del Auto Supremo
459, pero no asumió la notificación como “legal” al estar -a su criterio- dirigida a otra persona,
apreciación incorrecta, dado que la notificación no tiene por objeto cumplir una simple
formalidad procesal, sino que su fin es asegurar que la decisión, resolución o actuado que se
notifica, sea efectivamente conocida por la parte con los consiguientes efectos que pueda
generar. Por consiguiente, en cuanto a la problemática planteada en el presente fundamento,
tampoco corresponde otorgar la tutela solicitada

Resuelto como se encuentra el punto cuestionado, -que dicho sea de paso no constituye un
elemento de relevancia en el tema de fondo-; sin embargo, sólo a manera de aclaración, es
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 907
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

pertinente recordar los razonamiento asumidos en las SSCC 1716/2010-R y 1529/2011-R,


respecto a que de forma exclusiva corresponde a los jueces y tribunales de primera instancia el
conocer y resolver la excepción de extinción de la acción penal, en razón a la oportunidad de
plantear la misma conforme lo prevé el art. 314 del Código de Procedimiento Penal (CPP), así
como también en atención a la materialización del derecho a impugnar y otras consideraciones
desarrolladas en dichos fallos.

III.4. Sobre la ausencia de congruencia y la falta de fundamentación que justifiquen el


incremento del quantum de la pena impuesta a los accionantes

III.4.1. El debido proceso y la fundamentación y congruencia de las resoluciones

La triple dimensión del debido proceso, se encuentra reconocida en la Constitución Política del
Estado, que lo consagra como un principio, un derecho fundamental y una garantía
jurisdiccional.

Su protección como garantía jurisdiccional, implica a su vez el resguardo de los elementos


constitutivos del debido proceso, traducidos en derechos fundamentales, entre ellos la
fundamentación y congruencia de las resoluciones emitidas tanto por autoridades judiciales
como administrativas, que se constituyen en normas rectoras de la actividad procesal.
Corresponde en consecuencia, referirse a los dos elementos constitutivos del debido proceso
enunciados: fundamentación y congruencia, dado que los mismos son invocados como
vulnerados por la parte accionante.

Respecto a la fundamentación de las resoluciones, la SC 2023/2010-R de 9 de noviembre,


resume en forma precisa los razonamientos doctrinales asumidos sobre el particular, señalando:
“La garantía del debido proceso, comprende entre uno de sus elementos la exigencia de la
motivación de las resoluciones, lo que significa, que toda autoridad que conozca de un reclamo,
solicitud o dicte una resolución resolviendo una situación jurídica, debe ineludiblemente
exponer los motivos que sustentan su decisión, para lo cual, también es necesario que exponga
los hechos establecidos, si la problemática lo exige, de manera que el justiciable al momento de
conocer la decisión del juzgador lea y comprenda la misma, pues la estructura de una
resolución tanto en el fondo como en la forma, dejará pleno convencimiento a las partes de que
se ha actuado no sólo de acuerdo a las normas sustantivas y procesales aplicables al caso, sino
que también la decisión está regida por los principios y valores supremos rectores que rigen al
juzgador, eliminándose cualquier interés y parcialidad, dando al administrado el pleno
convencimiento de que no había otra forma de resolver los hechos juzgados sino de la forma en
que se decidió.

(…) cabe señalar que la motivación no implicará la exposición ampulosa de consideraciones y


citas legales, sino que exige una estructura de forma y de fondo, pudiendo ser concisa, pero
clara y satisfacer todos los puntos demandados, debiéndose expresar las convicciones
determinativas que justifiquen razonablemente su decisión en cuyo caso las normas del debido
proceso se tendrán por fielmente cumplidas; (…). Así la SC 1365/2005-R de 31 de octubre,
entre otras”.

Del citado razonamiento, se concluye que la fundamentación de las resoluciones judiciales,


constituye un elemento inherente a la garantía jurisdiccional del debido proceso, lo que significa
que la autoridad que emite una resolución necesariamente debe exponer los hechos, la
valoración efectuada de la prueba aportada, los fundamentos jurídicos de su determinación y las
normas legales que aplica al caso concreto y que sustentan su fallo; lo que de ninguna manera
implica una argumentación innecesaria que abunde en repeticiones o cuestiones irrelevantes al
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 908
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

caso, sino que al contrario debe desarrollar, pero con precisión y claridad, las razones que
motivaron al juzgador a asumir una determinada resolución, claro está con la justificación legal
que respalda además esa situación.

La congruencia por su parte, responde a la estructura misma de una resolución, por cuanto
expuestas las pretensiones de las partes traducidas en los puntos en los que centra una acción o
recurso, la autoridad competente para resolver el mismo está impelida de contestar y absolver
cada una de las alegaciones expuestas y además de ello, debe existir una armonía lógico-jurídica
entre la fundamentación y valoración efectuadas por el juzgador y el decisum que asume.

En ese marco, la congruencia abarca dos ámbitos, el primero referido a la unidad del proceso; es
decir, la coherencia y vínculo que debe existir entre una resolución y otra dentro de un mismo
proceso, y el segundo en cuanto a la consideración y resolución de todos los puntos puestos a
consideración del juzgador, lo que significa que también debe existir coherencia y unidad de
criterio dentro de una misma resolución, dado que la misma debe guardar correspondencia con
todo lo expuesto a lo largo de su contenido, caso contrario carecería de consecuencia, siendo
inviable que luego de analizar determinados hechos se llegue a resultados distintos, vulnerando
la construcción jurídica que toda resolución debe tener en aplicación y resguardo del debido
proceso (en ese sentido se expone el criterio mencionado las SSCC 1009/2003-R y 0639/2011-R
entre otras).

III.4.2. Valoración de la prueba,

Como ya se expresó en el Fundamento Jurídico III.2.1., en correspondencia con la naturaleza


jurídica y alcance del amparo constitucional, la jurisprudencia constitucional asumió criterios de
autorrestricción, siendo uno de ellos la valoración de la prueba, por cuanto dicha labor -
conforme lo establece el ordenamiento jurídico boliviano- es una facultad privativa de las
autoridades que sustancian un proceso judicial o administrativo, ello obedece a la observancia de
los principios de contradicción e inmediación que rigen el desarrollo de un proceso y la libertad
de aplicación de la sana crítica del juzgador.

Ahora bien, la valoración de la prueba como facultad privativa de la jurisdicción ordinaria, no


implica que esa labor no pueda ser revisada por la jurisdicción constitucional cuando se
demanda la vulneración de derechos fundamentales y garantías constitucionales; empero, esa
tarea está condicionada a determinados presupuestos que responden precisamente al alcance de
la revisión pero únicamente en resguardo de derechos y no así como una interferencia o
intromisión en la facultad valorativa del juzgador.

En ese sentido, la jurisprudencia constitucional ha asumido que: “…la facultad de valoración de


la prueba en las acciones tutelares corresponde privativamente a los jueces y tribunales de la
jurisdicción ordinaria y, por ende, la justicia constitucional no puede pronunciarse sobre dicha
labor, salvo que en la misma se hubieren lesionado derechos y garantías fundamentales, caso
en el cual la justicia constitucional se limita a determinar si la valoración efectuada se ha
apartado de los marcos legales de razonabilidad y equidad o si se ha omitido arbitrariamente
valorar determinada prueba…”. (SSCC 0123/2011-R y 1114/2011-R, entre otras).

De lo referido se concluye que la jurisdicción constitucional está impedida de ingresar a valorar


la prueba, dado que ello constituye una atribución conferida privativa y exclusivamente a las
autoridades jurisdiccionales o administrativas; sin embargo, tiene la obligación de verificar si en
esa tarea no existió apartamiento de los marcos legales de la razonabilidad, o si se omitió la
consideración de alguna prueba incorporada legalmente, supuestos en los que sí corresponde la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 909


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

revisión de la valoración efectuada a objeto de evidenciar si existió lesión a derechos


fundamentales o garantías constitucionales.

III.4.3. El caso concreto

Los accionantes fundan su demanda, en el hecho de que el Auto Supremo impugnado carece de
motivación y congruencia, por cuanto no contiene fundamentos jurídicos que justifiquen el
incremento de la pena impuesta, además que se evidenciaba ausencia total de relación fáctica así
como de fundamentación legal.

Al respecto, de la revisión de los antecedentes presentados, concretamente del contenido del


Auto Supremo 339, ahora impugnado, se constata que el mismo se encuentra debidamente
fundamentado, toda vez que, en el quinto Considerando del fallo, los Ministros demandados
efectúan una relación extensa -pero al mismo tiempo precisa- sobre la transferencia de los bienes
inmuebles de propiedad de ENFE que originó la acción penal en análisis, para luego definir las
infracciones a la ley sustantiva y la actuación de los Tribunales de instancia, efectuando para
ello una valoración de los hechos y de los elementos probatorios aportados por las partes en el
proceso, señalando incluso en forma expresa la prueba producida en el proceso que estaba
siendo considerada y el valor que se le asignaba.

Luego del desarrollo de la citada argumentación, en el sexto Considerando, las autoridades


judiciales demandadas a fin de establecer la responsabilidad que correspondía a cada uno de los
imputados, desarrollaron en forma individualizada los criterios jurídicos y fácticos que
correspondían a cada uno de ellos en base a su grado de participación en el hecho, así en el
punto 10 del citado Considerando y respecto a los accionantes y los otros tres miembros del
Directorio, los demandados argumentan que dichos procesados, en su calidad de miembros del
Directorio de ENFE, intervinieron en la aprobación de pliegos de especificaciones para
convocatoria a licitación pública de los bienes de la citada Empresa, aprobadas mediante
Resoluciones de Directorio 051/96 y 053/96 de 26 de agosto y 3 de septiembre de 1996,
respectivamente, sin que para tal efecto, se hubiera contado con información financiera
confiable y fidedigna respecto al valor de los terrenos a ser vendidos, y siendo que ejercían
cargos de dirección tenían el deber de adoptar las medidas más convenientes para los intereses
de la Empresa, pero que al no haber actuado con sus obligaciones, desconocieron la existencia
de los avalúos Levin y que si actuaban de acuerdo a dichos datos, el delito de contratos lesivos al
Estado no se hubiera cometido. Añaden además, que la Jueza a quo valoró con mejor criterio la
prueba y efectuó una correcta calificación de la conducta de los procesados respecto al tipo
penal previsto por el art. 221 en relación a la última parte del art. 20 del CP, por lo que resultaba
evidente que el Auto de Vista impugnado en casación, infringió el art. 221 del citado Código.

Conforme a ello, y luego de la exposición individualizada de motivos, los Ministros


demandados concluyen que en cuanto a la imposición de las penas, se advertía que la Sentencia
de primera instancia incurrió parcialmente en error, pues no obstante haber mencionado que para
el efecto se debía tener en cuenta la mayor o menor gravedad de los hechos y reconociendo que
el Presidente Ejecutivo, los Gerentes y el Directorio (del cual eran parte los accionantes),
adjudicaron bienes por precios inferiores al valor catastral, no aplicó tal convencimiento al fijar
las penas, razón por la cual correspondía incrementar las sanciones respectivas hasta el máximo
previsto.

Consecuentemente, no se advierte acto ilegal ni omisión indebida en la que hubiesen incurrido


las autoridades judiciales demandadas, por cuanto conforme se desarrolló precedentemente, el
Auto Supremo 339, se encuentra debidamente fundamentado, con la exposición de las razones
que motivaron la decisión de casar el Auto de Vista impugnado y declarar subsistente la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 910
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Sentencia de primera instancia, además de los motivos por los cuales se estableció que
correspondía el incremento del quantum de la pena impuesta en primera instancia, tarea en la
que no se advierte irrazonabilidad ni tampoco la existencia de omisión valorativa que hubiesen
derivado en vulneración de derechos, por ende no corresponde tampoco ingresar al fondo de la
valoración de prueba efectuada por los Ministros demandados, al no darse los presupuestos y
condiciones que posibiliten dicha revisión, siendo, -como se estableció en el fundamento
jurídico precedente- que ello constituye una facultad privativa de la jurisdicción ordinaria y sólo
corresponde su revisión cuando se evidencie la lesión de derechos o garantías, situación que no
se presenta en el caso en análisis.

Finalmente, respecto a la falta de congruencia alegada por los accionantes, corresponde indicar
que del contenido del fallo impugnado, se evidencia que el mismo contiene una armonía en la
relación fáctica efectuada, los fundamentos jurídicos y las normas aplicables al caso que fueron
considerados a objeto de establecer la responsabilidad penal de cada uno de los procesados, y en
base a ello asumir el decisum en coherencia con el grado de participación establecido de cada
imputado en las transferencias que originaron los ilícitos penales objeto de la acción penal;
evidenciándose un nexo de causalidad entre las pretensiones y alegatos de las partes, las pruebas
consideradas y valoradas y la consecuencia jurídica emergente de esa relación.

Por consiguiente, al constatarse que las autoridades judiciales demandadas asumieron sus
determinaciones en base a una Resolución suficiente y debidamente fundamentada, sin que se
evidencie irrazonabilidad ni omisión valorativa, además de contener la congruencia obligatoria
en todo su contenido, se advierte que actuaron conforme a derecho, por lo que no corresponde
otorgar la tutela solicitada.

Por los fundamentos expuestos se concluye que los Tribunales de garantías al haber concedido
las acciones de amparo constitucional, no evaluaron correctamente los datos del proceso ni las
normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud de lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR las Resoluciones 278/2009 de 18 de septiembre, cursante de fs. 335 a 339 y vta.
y 319/2009 de 20 de octubre, que corre de fs. 364 a 368, y, en consecuencia, DENEGAR la
tutela solicitada, en base a los fundamentos expuestos precedentemente.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Silvana Sandoval Landívar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 911


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO


INDICE GENERAL INDICE DE JURISPRUDENCIA ABRIL
CONSTITUCIONALIDAD ABRIL ABRIL

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0100/2012


Sucre, 23 de abril de 2012

SALA LIQUIDADORA TRANSITORIA

Mag. Relatora: Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco


Acción de cumplimiento
Expediente: 2009-20482-41-ACU
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 339/2009 de 9 de septiembre, cursante de fs. 234 a 238, pronunciada


dentro de la acción de cumplimiento, interpuesta por Iván Gantier Lemoine contra José
Vladimir Uriona Guzmán, Gerente del Régimen Disciplinario, Javier Ledezma Miranda,
Edwin Jaime Ovando Palenque, David Baptista Velásquez y María Hortencia Edith Terán
Alba, Vocales del Tribunal Disciplinario, todos del Consejo de la Judicatura -ahora
Consejo de la Magistratura-.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

El accionante, mediante memorial presentado el 21 de agosto de 2009, cursante de fs. 19 a 23,


ampliado en la misma fecha (fs. 34 y vta.), señaló:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 5 de marzo de 2009, el Tribunal Disciplinario del Consejo de la Judicatura, conformado por


Javier Ledezma Miranda y Jaime Ovando Palenque, con la participación del Gerente del
Régimen Disciplinario, Vladimir Uriona Guzmán, dictaron el Auto de apertura de proceso
disciplinario 018/2009, a través del cual, se dio inicio a una investigación en su contra y de otro
Vocal del Tribunal Agrario Nacional, proceso sancionatorio dentro del cual, sin tener
competencia para dicho efecto, dispusieron la suspensión preventiva de sus funciones como
Vocal del Tribunal Agrario Nacional, por el tiempo de sesenta días, con retención de haberes,
decisión asumida sobre la base del art. 92 inc. 2) del Reglamento de Procesos Disciplinarios del
Poder Judicial (RPDPJ), medida que fue ejecutada por la Presidencia del Tribunal Agrario
Nacional.

Agrega que, “sin considerar que su decisión anterior era ilegal, por contraria a las normas
expresas del Consejo de la Judicatura” (sic), un segundo Tribunal Disciplinario, esta vez
conformado por Javier Ledezma Miranda y David Baptista Velásquez, nuevamente con la
participación activa de Vladimir Uriona Guzmán, emitieron un segundo Auto de apertura de
proceso disciplinario de 4 de mayo de 2009, en el que determinaron como medida precautoria la
suspensión de funciones por el plazo máximo que la norma prevé, también con retención de
haberes.

Indica que, la Ley del Consejo de la Judicatura, en su art. 46, determina el contenido del Auto de
apertura, sin que éste otorgue facultad alguna al Tribunal Disciplinario de disponer otras
medidas adicionales a las expresamente señaladas.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 912
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Manifiesta que, mediante Acuerdo del Plenario 329/2006 de 19 de septiembre, el Consejo de la


Judicatura, sin contar con atribuciones modificó “a su antojo” la Ley del Consejo de la
Judicatura, puesto que dispuso en el art. 92 del RPDPJ que los Tribunales Sumariantes
dependientes de dicha entidad, tenían la facultad de suspender en sus funciones a servidores
públicos hasta sesenta días calendario, en todos los casos con retención de haberes mientras dure
la imposición de la medida preventiva.

Refiere que, la señalada facultad de suspender a funcionarios del Órgano Judicial con retención
de haberes, únicamente se halla determinada en el art. 52 de la Ley del Consejo de la Judicatura
(LCJ); sin embargo, dicha atribución es exclusiva del Pleno del Consejo de la Judicatura, pero
no extensible a un Tribunal Sumariante, motivo por el que en los hechos existe incumplimiento
de los arts. 46 y 52 de la citada Ley, que a su vez deriva en la vulneración del art. 410.II.2 de la
Constitución Política del Estado (CPE).

Arguye que la Sala Civil Primera de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora Tribunal
Departamental de Justicia- de Chuquisaca, saliendo por los fueros de la ley y la Constitución
Política del Estado, en el fallo de 9 de mayo de 2009, determinó que la norma reglamentaria de
los procesos disciplinarios, en cuanto a la medida de suspensión, está excediendo los límites
impuestos en la Ley del Consejo de la Judicatura y el principio de jerarquía normativa
determinado por la propia Ley Fundamental.

Finalmente en el memorial de ampliación agrega que el 21 de agosto de 2009, fue notificado con
un tercer Auto de apertura de proceso disciplinario, sin que en el mismo se consigne de manera
concreta contra quienes es instaurado.

I.1.2.Normas supuestamente incumplidas

El accionante alega que las autoridades demandadas no cumplieron con las normas contenidas
en los arts. 46 y 52 de la LCJ, en clara vulneración del art. 410 de la CPE, con relación a los arts.
115 y 117 también de la CPE.

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita, se dejen sin efecto los Autos de apertura de proceso disciplinario de 5 de
marzo y de 4 de mayo, ambos de 2009, a objeto de que los demandados den estricto
cumplimiento a las normas acusadas de quebrantadas.
I.2.Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 9 de septiembre de 2009, según consta en el acta cursante de


fs. 227 a 231, con la presencia de la parte accionante y los terceros interesados, en ausencia de
las autoridades demandadas, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1.Ratificación y ampliación de la demanda

El abogado del accionante, se ratificó en los argumentos de la demanda formulada, ampliándola


en el sentido de que en el expediente de apertura de proceso no cursa ninguna prueba que
acredite investigación previa y que por consiguiente también fue incumplido el precepto
constitucional del juez natural por parte de las autoridades demandadas.

I.2.2.Informe de las autoridades demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 913


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

Mediante informe escrito cursante de fs. 167 a 185, los demandados señalaron que: a) El
Tribunal de garantías es incompetente para conocer la demanda, por cuanto será una ley de
desarrollo la que determine la autoridad competente para resolver las acciones de cumplimiento,
aspecto que no fue aclarado en la Constitución Política del Estado; b) Según los argumentos del
propio accionante, el demandado debería ser el propio Presidente del Tribunal Agrario Nacional,
autoridad que en los hechos ejecutó la medida de suspensión con retención de haberes; c) Es el
Plenario del Consejo de la Judicatura, la instancia institucional que generó la norma ahora
cuestionada, siendo por tanto dicho cuerpo colegido, que a su criterio contaba con legitimación
pasiva dentro de la presente acción de cumplimiento; d) El accionante no agotó las instancias
administrativas regulares de impugnación correspondientes a los trámites disciplinarios
18/2009/SRE, 72/2009/SRE y 132/2009/SRE, tratando únicamente de entrabar los procesos
sumarios iniciados en su contra, acudiendo a la jurisdicción constitucional; e) La presente acción
de cumplimiento no procede en razón de existir cosa juzgada constitucional, puesto que el
accionante el 13 de abril de 2009, interpuso un recurso de carácter constitucional, con identidad
de sujeto, objeto y causa, ante la Sala Civil Segunda. En ese mismo sentido planteó acción de
amparo constitucional dentro del trámite 18/2009/SRE y en el trámite 72/2009/SRE interpuso
acción de inconstitucionalidad; f) El accionante ha consentido los supuestos actos de violación,
ya que reconoció plenamente la competencia del Tribunal Disciplinario al presentar las acciones
constitucionales señaladas precedentemente; g) En el proceso disciplinario ahora cuestionado, se
observó el respeto al debido proceso, toda vez que la aplicación de las medidas preventivas no
significa que ya se haya impuesto sanción; h) No hubo incumplimiento de los arts. 46 y 52 de la
LCJ, en razón a que el Consejo de la Judicatura en uso de las atribuciones conferidas por el art.
13.VI.2 de la citada Ley, puede emitir acuerdos y dictar resoluciones, disposición que guarda
relación con el art. 195.2 de la CPE; así también, pueden ser iniciados procesos administrativos
sin necesidad de investigación previa; i) No existió violación de la garantía del juez natural, toda
vez que el Tribunal Disciplinario, fue designado con anterioridad al hecho procesado, tampoco
se ha transgredido el derecho a la defensa, en razón a que el accionante ha podido acceder a la
misma de manera irrestricta, interponiendo excepciones e incidentes; asimismo, se han respetado
los plazos procesales; j) El trámite 132/2009/SRE se encuentra en periodo de prueba, aún no se
ha dictado resolución, sin que se haya establecido todavía la responsabilidad o no del
accionante; y, k) Se dio cumplimiento al art. 46 de la LCJ, por cuanto los Autos de apertura
cuestionados, contienen los requisitos comprendidos en el citado artículo y en lo que se refiere al
art. 52 de la citada Ley, el Tribunal Sumariante actúa por delegación del propio Consejo de la
Judicatura, conforme lo establece el art. 91.3 en concordancia con el art. 90, ambos del RPDPJ,
aprobado por el Plenario del Consejo de la Judicatura mediante el Acuerdo 329/2006, tantas
veces citado.

1.2.3. Intervención de los terceros interesados

Por memorial cursante de fs. 141 a 147, Julia Ramos Sánchez en su condición de Ministra de
Desarrollo Rural y Tierras, manifestó: 1) Iván Gantier Lemoine debió interponer los recursos de
revocatoria y jerárquico correspondientes, con carácter previo a activar la jurisdicción
constitucional, por lo cual su pretensión se halla alcanzada por el principio de subsidiaridad; y,
2) La acción de cumplimiento no es el medio eficaz para impugnar actuaciones realizadas con
falta de competencia y facultad, siendo la vía idónea de reclamación el recurso directo de
nulidad.

A través del memorial cursante de fs. 148 a 154, Iván Castellón Quiroga, Viceministro de
Gestión y Desarrollo Forestal, dependiente del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, a
tiempo de ratificar la denuncia de prevaricato presentada contra Iván Gantier Lemoine, señaló lo
siguiente: i) Los argumentos planteados por el accionante ya fueron ampliamente analizados y
resueltos en una acción de amparo constitucional previamente sometida a las instancias
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 914
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

jurisdiccionales pertinentes; ii) Si el Reglamento de Procesos Disciplinarios del Poder Judicial,


aprobado mediante Acuerdo 329/2006, se encuentra vigente, entonces se presume su
constitucionalidad, por tanto no puede ser cuestionada su aplicación; y, iii) El accionante no ha
demostrado el supuesto incumplimiento de los arts. 46 y 52 de la LCJ.

De acuerdo al memorial cursante de fs. 222 a 226, María del Lourdes Burgoa Gonzáles en
representación del Viceministerio de Tierras, refirió: a) La acción de cumplimiento no procede
contra resoluciones judiciales que por cualquier otro recurso puedan ser modificadas, aún
cuando no se haya hecho uso oportuno de dicho recurso; b) A través de la acción de
cumplimiento no se puede analizar si determinada autoridad “recurrida” actuó con competencia
o no, siendo la vía idónea el recurso directo de nulidad; c) Todos los funcionarios judiciales se
hallan regidos por la Ley del Consejo de la Judicatura y se encuentran en la obligación de
conocer in extenso sus atribuciones y limitaciones; y, d) El Reglamento de Procesos
Disciplinarios del Poder Judicial no fue impugnado al momento de ser aprobado y puesto en
vigencia, razón por la cuál ahora es impertinente su cuestionamiento.

I.2.4. Resolución

Mediante Resolución 339/2009 de 9 de septiembre, cursante de fs. 234 a 238, la Sala Social,
Administrativa y Tributaria de la Corte Superior del Distrito Judicial de Chuquisaca, constituida
en Tribunal de garantías, declaró “procedente” la acción, disponiendo dejar sin efecto los Autos
de apertura de proceso de “4 de marzo, 5 de mayo” y 21 de agosto, todos de 2009, ordenando el
cumplimiento de los arts. 46 y 52 de la LCJ, 39 y 89.II del RPDPJ, en base a los siguientes
argumentos de orden legal: i) La acción de cumplimiento no es alcanzada por el principio de
subsidiaridad “en la forma establecida para la acción de Amparo Constitucional” (sic), en razón
a que se trata más bien de un procedimiento ágil y expedito para corregir trámites por
incumplimiento de norma expresa; ii) Del análisis de los arts. 46 y 52 de la LCJ se puede
establecer que los autos de apertura deben contener el nombre del inculpado, el hecho atribuido
y su calificación legal y la apertura del término de prueba; iii) Si bien el Consejo de la Judicatura
se encuentra facultado para suspender del ejercicio de sus funciones a funcionarios contra
quienes se hubiera abierto proceso penal o cuando se les haya iniciado proceso disciplinario por
faltas graves y muy graves, no significa en modo alguno, que el Tribunal Disciplinario haya
podido determinar la retención de haberes; iv) La facultad de delegación por parte del Consejo
de la Judicatura de sus funciones disciplinarias, está circunscrita únicamente a lo establecido por
ley, es decir que sus competencias se limitan exclusivamente a reglamentar las normas que
pueden ser delegables; v) La disposición precautoria prevista por los Tribunales Sumariantes
“accionados”, referida a la suspensión con retención de haberes, exceden sus competencias en
razón a que la norma aludida precedentemente prevé únicamente la suspensión y no así la
retención de haberes, determinación que no tiene sustento legal; vi) Los Autos de apertura de
proceso de 5 de marzo y 4 de mayo de 2009, fueron dictados sin que medie investigación previa.

I.3. Consideraciones de Sala

Por mandato de las normas previstas por el art. 20.I y II de la Ley 212 de 23 de diciembre de
2011; la Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional, conformó la Sala Liquidadora
Transitoria, posesionando a los Magistrados de la misma, el 15 de febrero de 2012, a objeto de
la liquidación de las acciones tutelares ingresadas a los Tribunales de garantías hasta el 31 de
diciembre de 2011, en el marco de la Ley 1836 de 1 de abril de 1998. Con la referida
competencia, se procedió al sorteo de la presente causa, dictándose resolución dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 915


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

De la revisión de los antecedentes que informan el expediente, se evidencia lo siguiente:

II.1. Cursa en antecedentes, Auto de apertura de proceso disciplinario correspondiente al trámite


018/2009 de 5 de marzo, por el cuál, el Tribunal Sumariante del Consejo de la Judicatura inicio
proceso disciplinario contra de Iván Gantier Lemoine en el cual se dispone la medida
precautoria de suspensión preventiva con retención de haberes por el tiempo de sesenta días (fs.
4 a 5).

II.2. El 4 de mayo de 2009, el Tribunal Disciplinario del Consejo de la Judicatura pronunció el


Auto de apertura de proceso disciplinario correspondiente al trámite 72/2009/SRE, mediante el
cuál, se apertura un segundo proceso disciplinario contra Iván Gantier Lemoine, determinándose
también la medida precautoria de suspensión preventiva con retención de haberes (fs. 10 a 11).

II.3. De fs. 27 a 33, cursa el informe acusatorio emitido por Carmen Auza Paz, Investigadora
Nacional -Coronela de Régimen Disciplinario- del Consejo de la Judicatura, dirigida al Tribunal
Sumariante, dentro del trámite disciplinario 132/2009 de 20 de agosto, por el que se acusa a Iván
Gantier Lemoine, Vocal del Tribunal Agrario Nacional y otro, por haber adecuado su conducta a
las faltas disciplinarias muy graves estipuladas en los arts. 39.14 de la LCJ; 179 Ter del Código
Penal (CP) con relación a la figura de prevaricato establecida en el art. 173 del citado Código,
solicitando se aplique la medida preventiva de suspensión de sus actividades laborales con
retención de haberes por el máximo previsto, todo en previsión del art. 92 del RPDPJ y en la
parte in fine del art. 52 de la LCJ.

II.4. Los miembros del Tribunal Sumariante, mediante nota CITE/CONSEJO/GRD/PJ 409/2009
de 6 de marzo, dirigida a Luis Alberto Arratia Jiménez, Presidente del Tribunal Agrario
Nacional, comunican que dentro del trámite disciplinario 18/2009/SRE, se resolvió la
suspensión preventiva de Iván Gantier Lemoine, con retención de haberes (fs. 3).

II.5. José Vladimir Uriona Guzmán, Gerente del Régimen Disciplinario, por el
CITE/CONSEJO/GRD/PJ 646/2009 de 11 de mayo, comunica a Luis Alberto Arratia Jiménez,
Presidente del Tribunal Agrario Nacional, que dentro del Trámite 72/2009/SRE, se determinó la
suspensión de funciones de Iván Gantier Lemoine, con retención de haberes (fs. 9).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante considera que fueron incumplidos los arts. 46 y 52 de la LCJ en clara vulneración
del art. 410, con relación a los arts. 115 y 117, todos de la CPE, toda vez que los Tribunales
Disciplinarios del Consejo de la Judicatura, dictaron dos Autos de apertura en procesos
sancionatorios iniciados en su contra y sin tener competencia para ello, dispusieron la
suspensión preventiva de sus funciones como Vocal del Tribunal Agrario Nacional, con
retención de haberes, decisiones asumidas en base al art. 92 inc. 2) del RPDPJ. En consecuencia,
corresponde analizar, si en el presente caso, se debe conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de cumplimiento: Naturaleza jurídica, objeto y ámbito de protección

La jurisprudencia constitucional contenida en la SC 0258/2011-R de 16 de marzo, respecto a la


naturaleza jurídica de la acción de cumplimiento, señaló que: “…la acción de cumplimiento está
configurada como un verdadero proceso constitucional, por las siguientes razones: i) Está
configurada procesalmente por la Constitución Política del Estado; ii) Su conocimiento y
resolución es de competencia de la justicia constitucional; iii) Tiene como objeto -conforme se
verá- garantizar el cumplimiento de la Constitución y la ley y, en tal sentido, protege el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 916


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

principio de legalidad y supremacía constitucional y la seguridad jurídica; y, iv) Tutela de


manera indirecta derechos fundamentales y garantías constitucionales,
-como se analizará posteriormente-.

La acción de cumplimiento está integrada por una serie de actos de procedimiento como la
demanda, el informe, la audiencia, la resolución y posterior revisión por el Tribunal
Constitucional, que configuran un proceso constitucional autónomo, de carácter extraordinario,
tramitación especial y sumaria, en el que se reclama la materialización de un deber
-constitucional o legal- omitido, existe en tal sentido una pretensión, partes discrepantes, un
procedimiento específico conforme al cual se desarrolla la acción, y un juez o tribunal que
resuelve otorgar o denegar la tutela.

Cabe resaltar que esta garantía constitucional jurisdiccional está prevista en nuestra
Constitución como una acción de defensa, entendiéndola como la potestad que tiene toda
persona -individual o colectiva- de activar la justicia constitucional en defensa de la
Constitución Política del Estado y de las normas jurídicas, ante el incumplimiento de deberes
concretos contenidos en ellas. Es una acción sumaria, ágil y expedita a favor del ciudadano,
cuyo conocimiento compete a la jurisdicción constitucional, que tiene por finalidad garantizar
el cumplimiento de las normas constitucionales y legales, otorgando seguridad jurídica y
materializando el principio de legalidad y supremacía constitucional; de ahí que también se
configure como componente esencial del subsistema garantista, ampliamente mejorado
debiendo invocarse ante el incumplimiento de deberes específicos previstos en la Constitución y
en la Ley”.

Sobre el particular, la referida Sentencia Constitucional, dejó establecido respecto al ámbito de


protección de la acción de cumplimiento, señalando en ese sentido que se la debe considerar
para “…garantizar la materialización de un deber omitido; que tiene que estar de manera
expresa y en forma específica previsto en la norma constitucional o legal. En ese entendido, el
deber al que hace referencia la norma constitucional, no es genérico -como el cumplimiento de
la ley- sino un deber concreto, que pueda ser exigido de manera cierta e indubitable a los
servidores públicos; es decir, el deber tiene que derivar de un mandato específico y
determinado y debe predicarse de una entidad concreta competente; ese es el sentido que, por
otra parte, le ha otorgado al deber omitido la Corte Constitucional de Colombia en la Sentencia
C-651/03 y el Tribunal Constitucional peruano que ha establecido determinados requisitos para
que se ordene el cumplimiento del deber omitido: mandato vigente, cierto y claro, no estar
sujeto a controversia compleja ni a interpretaciones dispares, deber ser ineludible, de
obligatorio cumplimiento y ser incondicional” (las negrillas son nuestras).

En cuanto al ámbito de protección, la citada Sentencia Constitucional indicó lo siguiente: “…de


acuerdo al texto constitucional contenido en el art. 134 de la CPE, procede en caso de
incumplimiento de disposiciones constitucionales o de la ley por parte de servidores públicos
con el objeto de garantizar la ejecución de la norma omitida.

Conforme a dicho texto, la acción de cumplimiento, tiene como objeto garantizar la


materialización de la Constitución y la ley, protegiendo de esa manera el principio de
legalidad y supremacía constitucional, la seguridad jurídica, y a su vez, de manera indirecta,
derechos fundamentales y garantías constitucionales.

Cuando la Ley Fundamental establece como objeto de esta acción el cumplimiento de la


Constitución y la ley, hace referencia a un deber específico previsto en dichas normas, pues
como señala el art. 134 parágrafo tercero de la Constitución, el juez que conozca la acción, de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 917


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

encontrar cierta y efectiva la demanda, debe ordenar el cumplimiento del deber omitido” (las
negrillas nos corresponden).

Línea jurisprudencial a partir de la cual se tiene claramente establecido que la acción de


cumplimiento es una acción sumaria, ágil y expedita a ser interpuesta en defensa de la
Constitución Política del Estado y de las normas jurídicas, ante el incumplimiento de deberes
concretos contenidos en ellas.

III.2. El recurso directo de nulidad: Naturaleza jurídica, finalidad y alcances

Al respecto, es necesario remitirnos al art. 122 de la CPE, que establece la naturaleza de este
recurso señalando a la letra: “Son nulos los actos de las personas que usurpen funciones que no
les competen, así como los actos de las que ejercen jurisdicción o potestad que no emane de la
ley”; norma constitucional a partir de la cual se instituye este recurso como otro mecanismo de
defensa del derecho al debido proceso, respecto al elemento del juez natural.

Cabe señalar que, la Ley del Tribunal Constitucional a partir de su art. 79 y ss., determina su
procedencia y tramitación, determinando que:

“I. Procede el recurso directo de nulidad contra todo acto o resolución de quien usurpe
funciones que no le competen, así como contra los actos de quien ejerza jurisdicción o
potestad que no emane de la ley.

II. También procede contra las resoluciones dictadas o actos realizados por autoridad judicial
que esté suspendida de sus funciones o hubiere cesado” (las negrillas nos pertenecen).

En ese entendido, se tiene al recurso directo de nulidad como una acción jurisdiccional de
control de legalidad sobre los actos o resoluciones de las autoridades públicas, cuya
finalidad es declarar expresamente la nulidad de los actos invasivos o usurpadores de las
competencias delimitadas por la Constitución Política del Estado y las leyes, resguardando
así la institucionalidad y el equilibrio entre las acciones de defensa previstas por nuestra Norma
Fundamental.

III.3. Análisis del caso concreto

A partir de la revisión de la acción de cumplimiento que nos ocupa, se tiene que la problemática
planteada por el accionante radica en la determinación de las autoridades demandadas respecto a
la suspensión de sus funciones como Vocal del Tribunal Agrario Nacional, pues sostiene que
dicha determinación fue emitida sin que se cuente con la facultad pertinente, toda vez que refiere
que ésta atribución solamente le correspondería al Pleno del Consejo de la Judicatura, dando
lugar a la supuesta vulneración de su derecho al debido proceso previsto por los arts. 115 y 117
de la CPE, ya que las autoridades demandadas incumplieron con lo establecido por los arts. 46 y
52 de la LCJ.

De lo mencionado precedentemente, se colige que el accionante al denunciar el incumplimiento


del art. 52 de la LCJ, cuestiona la competencia con la cual actuaron las autoridades
demandadas para disponer la suspensión de sus funciones; en tal sentido conforme se tiene
explicado en el Fundamento Jurídico III.2 de esta Sentencia Constitucional y tomando en cuenta
lo establecido por nuestro ordenamiento jurídico constitucional respecto al control de
constitucionalidad en Bolivia, según la previsión del art. 202 de la CPE, entre otros, el control
competencial se realizará a través del recurso directo de nulidad, medio idóneo y eficaz
que se activa contra actos o resoluciones emitidos por quien usurpe funciones que no le
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 918
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL____________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR-SL

competen, así como contra los actos de quien ejerza jurisdicción o potestad que no emane
de la ley, y contra las resoluciones dictadas o actos realizados por autoridad judicial que esté
suspendida de sus funciones o, en su caso, hubiere cesado. Por dicha previsión este aspecto, en
el caso concreto formulado, no puede ser dilucidado mediante una acción de cumplimiento, por
lo que este Tribunal no puede conceder la tutela solicitada al respecto.

El razonamiento precedentemente citado implica un cambio de la línea jurisprudencial


establecida en la SC 1286/2011-R de 26 de septiembre, emitida dentro de un caso análogo.
En consecuencia, la situación planteada por el accionante respecto a las normas legales y
constitucionales invocadas como incumplidas, no es susceptible de protección a través de la
acción de cumplimiento; por cuanto, el Tribunal de garantías, al haberla declarado
“procedente”, no efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes del caso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Liquidadora Transitoria, en virtud a lo


previsto en el art. 20.II de la Ley 212 de 23 de diciembre de 2011; en revisión, resuelve:
REVOCAR la Resolución 339/2009 de 9 de septiembre, cursante de fs. 234 a 238, dictada por
la Sala Social, Administrativa y Tributaria de la Corte Superior del Distrito Judicial -ahora
Tribunal Departamental de Justicia- de Chuquisaca; y en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Blanca Isabel Alarcón Yampasi.-Magistrada.


Dr. Macario Lahor Cortez Chávez.-Magistrado.
Dra. Carmen Sandoval Landivar.-Magistrada.
Dra. Edith Vilma Oroz Carrasco.-Magistrada.
Dr. Zenón Hugo Bacarreza Morales.-Magistrado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/ABRIL 919


920
MAYO

921
922
RESOLUCIONES CONSTITUCIONALES EMITIDAS
POR LAS SALAS: PRIMERA ESPECIALIZADA,
SEGUNDA, TERCERA Y SALA PLENA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL

923
924
CONTROL DE
CONSTITUCIONALIDAD
TUTELAR

925
926
Sentencias Constitucionales
Promunciadas en Revisión de
Acciones de Defensa

927
928
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0115/2012


Sucre, 2 mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA

Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire


Acción de libertad
Expediente: 00070-2012-01-AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 072/2012 de 4 de febrero, cursante a fs. 29 y vta., pronunciada dentro de la


acción de libertad interpuesta por Nicollette Viscarra Irusta y Carlos Aparicio Seleme contra
Roberto Marcos Villa Pareja, Fiscal de Materia de la Unidad de Solución Temprana de la
Fiscalía Departamental de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 3 de febrero de 2012, cursante de fs. 7 a 8 vta. de obrados, los
accionantes expresan los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Debido a una denuncia formulada por Carlos Augusto Cardona Ayoroa y otros por los delitos de
estafa, falsedad material y uso de instrumento falsificado, el 2 de febrero del 2012, se
constituyeron en oficinas de la Unidad de Solución Temprana, dependiente de la Fiscalía
Departamental de La Paz, a objeto de prestar sus respectivas declaraciones informativas; sin
embargo, luego de prestar las mismas, fueron sorprendidos con la Resolución y orden de
aprehensión emitida por el Fiscal ahora demandado.

Refieren, que se encuentran ilegalmente aprehendidos, por cuanto el Fiscal del caso, actuó sin
facultades, porque dirigió una investigación atribuida a un fiscal de división.

Señalan también que, para su aprehensión, no concurrieron los presupuestos establecidos por el
art. 226 del Código de Procedimiento Penal (CPP), ya que la penalidad de los delitos
denunciados en su contra no superan el mínimo exigido de dos años; y por otra parte, tampoco
se fundamentó en la existencia de riesgos procesales de fuga u obstaculización, por lo que la
Resolución emitida por el Fiscal, carecería de motivación.

Por consiguiente, consideran que han sido ilegalmente aprehendidos e indebidamente


procesados.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Denuncian la vulneración de sus derechos al debido proceso y a la libertad, sin especificar, ni


citar las normas constitucionales que los contienen.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 929
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicitan se conceda la acción y se disponga su libertad inmediata. Con costas, daños y


perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Celebrada la audiencia pública el 4 de febrero del 2012, según consta del acta cursante de fs. 27
a 28 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de los accionantes ratificó los términos expuestos en la acción de libertad


interpuesta.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Fiscal de Materia de la Unidad de Solución Temprana de la Fiscalía Departamental de La


Paz, Roberto Marcos Villa Pareja, demandado, brindó informe oral en audiencia, puntualizando:
a) Que, evidentemente él desempeña funciones en la Unidad de Solución Temprana, y que en
primera instancia por conducto regular, se le asignó una denuncia por los presuntos delitos de
estafa, estelionato, apropiación indebida y abuso de confianza, interpuesta por Carlos Augusto
Cardona, la misma que ha sido puesta en conocimiento del Juez cautelar, así como el
correspondiente inicio de investigaciones; a la que se han sumado otras cuatro denuncias; b)
Asimismo, señaló que en la imputación formal presentada, se atribuye el delito de estafa con
víctimas múltiples conforme el art. “246 bis” del Código Penal (CP), siendo la sanción para este
delito la reclusión de 3 a 10 años, por lo que la penalidad del delito imputado hace viable la
aprehensión; y, c) Habiendo sido citados para la audiencia de medidas cautelares, los ahora
accionantes, recusaron al juez y presentaron la acción de libertad, en tal sentido, antes de que
interpongan esta acción, previamente debieron haber hecho su reclamo ante el Juez cautelar y no
activar paralelamente una acción constitucional extraordinaria, por lo que no se ha cumplido con
el principio de la subsidiariedad.

I.2.3. Resolución

El Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,


constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 072/2012 de 4 de febrero, cursante a
fs. 29 y vta., por la que denegó la acción de libertad formulada por Nicolette Viscarra Irusta y
Carlos Aparicio Seleme contra Roberto Marcos Villa, Fiscal de materia de la Fiscalía del
Distrito de La Paz, con los siguientes argumentos: 1) Según la jurisprudencia constitucional de
las SSCC 0201/2010-R de 24 de mayo y 007/2011-R de 7 de febrero, se determinó respecto a las
medidas cautelares, que rige el principio de subsidiariedad en relación a la aprehensión legal o
ilegal debiendo agotarse las vías procesales antes de acudir a la acción de libertad; y, 2) No se ha
demostrado por los accionantes, que se ha realizado la audiencia de aplicación de medidas
cautelares, que la Resolución pronunciada en la misma haya sido apelada y que exista
actualmente un Auto de Vista.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 930


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.1. Mediante Resoluciones de aprehensión, emitidas por el Fiscal accionado, se dispone la


aprehensión de Nicollete Paola Viscarra Irusta y Carlos Aparicio Seleme, ahora accionantes, a
objeto de que los mismos sean puestos a disposición del Juez cautelar (fs. 1 a 5).

II.2. Cursa orden de aprehensión emitido por el fiscal Roberto Marcos Villa Pareja, de 2 de
febrero del 2012, por el que se procedió a la aprehensión de Nicollete Paola Viscarra Irusta (fs.
6).

II.3. Los ahora accionantes, interponen la presente acción, ante el Juez de Sentencia de turno, la
misma que radica ante el Juez Segundo de Sentencia, quien señala audiencia para el día sábado 4
de febrero del 2012 (fs. 7 a 9).

II.4. La audiencia se desarrolla bajo la dirección del Juez de Instrucción en lo Penal de turno,
quien pronuncia la Resolución 072/2012 de 4 de febrero (fs. 27 a 29 vta.).

II.5. De acuerdo al informe prestado por el demandado en audiencia de acción de libertad, se


tiene que se ha realizado la comunicación correspondiente del inicio de investigación al Juez
cautelar de turno a efectos del control jurisdiccional (fs. 28 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes, arguyen que se encuentran ilegalmente detenidos e indebidamente procesados,


por cuanto la Resolución que dispuso su aprehensión, no ha sido debidamente fundamentada,
además que el Fiscal no tenia facultades para disponer su aprehensión por corresponder a un
fiscal de división el conocimiento del caso.

En consecuencia, corresponde en revisión verificar si tales extremos son evidentes, a fin de


conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de libertad y la competencia de los jueces y tribunales

El art. 23.I de la Constitución Política del Estado (CPE), determina:” Toda persona tiene derecho
a la libertad y seguridad personal. La libertad personal solo podrá ser restringida en los límites
señalados por ley, para asegurar el descubrimiento de la verdad histórica en la actuación de las
instancias jurisdiccionales”; y, el art. 13.I del texto constitucional, dispone que: “Los derechos
reconocidos por esta Constitución son inviolables, universales, interdependientes, indivisibles y
progresivos. El Estado tiene el deber de promoverlos, protegerlos y respetarlos”.

Asimismo, la Declaración Universal de Derechos Humanos, instrumento que forma parte del
bloque de constitucionalidad, en su art. 3 determina: “Todo individuo tiene derecho a la vida, a
la libertad y a la seguridad de su persona”.

De igual forma, el art. 8 de la misma Declaración establece: “Toda persona tiene derecho a un
recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que
violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley”.

Por su parte, el art. 125 de la CPE, establece: “Toda persona que considere que su vida está en
peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad
personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir de manera oral o escrita, por sí o por
cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 931
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De lo mencionado, se establece, que la acción de libertad ha sido instituida como un proceso


constitucional de naturaleza tutelar, que tiene la finalidad de brindar protección inmediata y
efectiva a derechos fundamentales como a la vida y a la libertad, los mismos consagrados por la
Constitución Política del Estado e instrumentos internacionales, que forman parte del bloque de
constitucionalidad, en los casos en que estos derechos, sean ilegal, indebidamente restringidos,
suprimidos o amenazados de restricción o supresión por actos u omisiones ilegales o indebidas
de autoridades públicas o particulares.

Esta acción puede ser interpuesta ante cualquier juez o tribunal competente en materia penal
solicitando que se guarde tutela a la vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las
formalidades legales o se restituya el derecho a la libertad.

A efectos de la interpretación de lo señalado, es menester previamente aludir a la SCP


0032/2012 de 16 de marzo, la misma que reiterando lo referido por la SC 0756/2011-R de 20 de
mayo, respecto de la competencia mencionó que esta consiste en: “…la capacidad o aptitud
reconocida a un Juez o Tribunal para ejercer funciones respecto de un asunto o materia, con la
finalidad que la conozca y resuelva. En los procedimientos constitucionales, también la
competencia del tribunal de garantías es de vital importancia, considerando que sus decisiones
sólo serán válidas, si emergen de quién o quienes estén revestidos de la facultad legal para
asumir y decidir acerca de la presunta vulneración de derechos fundamentales y garantías
constitucionales.

Al respecto, conviene precisar que del debido proceso en su faceta adjetiva, se desprende uno
de sus componentes esenciales, el del juez natural, que en síntesis constituye la legitimación de
una decisión proveniente de quien la ejerce por mandato legal, en el ámbito de la jurisdicción
constitucional, de la propia Ley Fundamental, por ello coincidimos en afirmar que la
competencia no puede ser prorrogable por la voluntad del juzgador, ni la tolerancia de las
partes, no puede delegarse por decisión personal, sólo es admisible excepcionalmente por
excusa o recusación, tampoco puede ser atribuida o apropiada indebidamente por un juez o
tribunal, de hacerlo sus actos y decisiones son nulos de pleno derecho, no tienen ningún efecto,
ni causan consecuencia jurídica alguna”.

En ese entendido la referida Sentencia moduladora de la SC 0756/2011-R de 20 de mayo, ha


dejado establecido que: “…en ese contexto, expresamente la norma fundamental otorga
competencia a los Jueces en materia penal, para el conocimiento y sustanciación de la acción
de libertad, por cuanto ningún otro juez o tribunal está habilitada para ejercer dicha
competencia, ni siquiera en suplencia legal, toda vez que si acaso no existiera Juez o Sala Penal
en el mismo Distrito Judicial que asuma competencia, la acción de libertad debe ser resuelta
necesariamente por cualquier otro Juez en materia penal, es decir por Jueces y Tribunales de
Sentencia en Capitales de departamento y Jueces de Instrucción o Mixtos en provincias,
exceptuando los Jueces de Ejecución Penal debido a las atribuciones y competencias
específicas asumidas por ley.

Es necesario aclarar que los Tribunales de Sentencia, asumirán excepcionalmente tal


competencia, sólo en caso de impedimento de la o las Salas Penales de la capital del Distrito
Judicial donde se haya presentado la acción de libertad, puesto que con relación a su
composición, dejarán de ser un Tribunal Penal de justicia ordinaria- compuesto por cinco
jueces, 2 técnicos y 3 ciudadanos-, y pasaran a sumir la competencia de un Tribunal de
Garantías Constitucionales - integrado por ambos jueces técnicos- y solo respecto a la acción
de libertad; (…).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 932


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Asimismo, del análisis a las normas y jurisprudencia citada, mas las reformas introducidas por
la Ley 007 de 18 de mayo de 2010, promulgada bajo el actual orden constitucional, en su art,
54 inc. 10), establece las atribuciones de los Jueces de Instrucción indica: 'Conocer y resolver
la Acción de Libertad, si no existieran jueces de sentencia en su asiento jurisdiccional, cuando
sea planteada ante ellos`.

En ese sentido, no existe duda alguna que la atribución del Juez de Instrucción en lo Penal,
para conocer y resolver una acción de libertad, sólo se da en provincias y de manera supletoria,
y no así en capitales de Departamento…”.

Conforme la jurisprudencia señalada, si bien se ha establecido claramente que serán competentes


para conocer y sustanciar la acción de libertad sólo los jueces en materia penal, es decir las Salas
Penales de los Tribunales Departamentales de Justicia, los jueces y tribunales de Sentencia en
Capitales de departamento, los jueces de sentencia y los jueces de instrucción en lo penal en
provincias de manera supletoria; y que de no existir juez o Sala Penal en el mismo departamento
que asuma competencia, la acción de libertad deberá ser resuelta por jueces y tribunales de
sentencia en Capitales de departamento y jueces de instrucción o mixtos en provincias,
exceptuando los jueces de ejecución penal; asimismo, que en caso de impedimento de las Salas
Penales en Capitales de Departamento, excepcionalmente asumirán la competencia los
tribunales de sentencia; empero, en este entendimiento no se ha tomado en cuenta que
cuando la acción de libertad sea planteada ante Salas Penales o jueces de sentencia en la
Capital de Departamentos, y la audiencia de acción de libertad deba llevarse a cabo los
días sábados, domingos o feriados, la Ley de Tribunal Constitucional Plurinacional ha
previsto en su art. 68.4 que la acción de libertad sea tramitada ante el juez de instrucción
cautelar, aspecto que vendría a constituir un caso excepcional en el que un juez de
instrucción de turno en lo Penal asumiría competencia y por lo tanto podría constituirse en
juez de garantías, sólo en el caso referido; este razonamiento no se aparta de lo ya
establecido por este Tribunal, sino mas bien contribuye a complementar lo ya referido.

En consecuencia la acción de libertad tal como prescribe el art. 125 de la CPE y la SC


0035/2012 de 16 de marzo, debe ser interpuesta ante las autoridades competentes señaladas
precedentemente, tanto en las Capitales de Departamento y las Provincias, las mismas que
conforme a procedimiento señalaran de inmediato día y hora de audiencia pública, la que tendrá
lugar dentro las veinticuatro horas contadas de interpuesta la acción, y sólo cuando estas
audiencias tuvieran que celebrase en sábado, domingo y feriado, asumirá la competencia de esta
acción un juez de instrucción en lo penal de turno.

III.2. La subsidiariedad excepcional en la acción de libertad

Por otra parte, siendo que la acción de libertad, se encuentra destinada a la protección y defensa
de los derechos a la vida y a la libertad personal; constituye una acción de carácter
extraordinaria, de tramitación especial y sumarísima. Consecuentemente, a través de dicha
acción, se evita una detención ilegal, o se repara la ilegal restricción de la libertad o el
procesamiento indebido, manteniendo las características de inmediatez de la protección, el
informalismo, la generalidad y la inmediación; procediendo contra cualquier autoridad pública,
pues no reconoce fueros ni privilegios.

En ese entendido, la acción de libertad, se configura como el medio más eficaz para restituir los
derechos afectados; sin embargo, en caso de existir mecanismos procesales específicos de
defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la
persecución o procesamiento indebido, deben ser activados previamente por el o los interesados
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 933
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

o afectados; en estos casos, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse


restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas, aspecto que
se encuentra enmarcado en los mandatos insertos en los arts. 8 de la Declaración Universal de
Derechos Humanos y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

Así, la jurisprudencia emitida, en la SC 0008/2010-R de 6 de abril, moduladora de la SC


0160/2005-R de 23 de febrero, en ese entendimiento ha establecido que: “I …la acción de
libertad, es el medio idóneo y eficaz para conocer y restituir cualquier tipo de lesión o
vulneración que pueda atentar al derecho a la vida, la libertad o constituir una persecución o
procesamiento indebido que atente o ponga en peligro el derecho a la libertad, cuando de
acuerdo a las circunstancias concretas a pesar de existir mecanismos de protección especifico y
establecidos por la ley procesal vigente, estos resulten ser evidentemente inoportunos o
inconducentes, de manera tal que esta acción de defensa, por la urgencia de la situación, se
configura como el medio más eficaz para restituir los derechos afectados; empero, en caso de
existir mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos
para restituir el derecho la libertad y a la persecución o procesamiento indebido deben ser
utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad
operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse
agotado estas vías específicas…”.

De igual forma, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, ha establecido tres situaciones excepcionales


en las que a través de la acción de libertad, no es posible ingresar al análisis de fondo de la
problemática denunciada a efectos de evitar que la acción de libertad se convierta en un medio
alternativo o paralelo que provoque confrontación jurídica con la jurisdicción ordinaria.

“Primer supuesto:

Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía cometieron


arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía no existe
aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez Cautelar de
turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el
aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella
donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De no ser así,
se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a través del
legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en el control
de la investigación.

Segundo Supuesto:

Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una resolución judicial de
medida cautelar que; por ende, afecta al derecho a la libertad física o de locomoción, con
carácter previo a interponer la acción de libertad, se debe apelar la misma, para que el
superior en grado tenga la posibilidad de corregir la arbitrariedad denunciada. Puesto que el
orden legal penal ha previsto ese medio impugnativo, precisamente para que a través de un
recurso rápido, idóneo, efectivo y con la mayor celeridad se repare en el mismo órgano judicial,
las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen cometido en dicha fase o etapa procesal. Lo
propio si está referido a cuestiones lesivas a derechos fundamentales relacionados a actividad
procesal defectuosa, o relacionado al debido proceso, casos en los cuales se debe acudir ante la
autoridad judicial que conoce la causa en ese momento procesal, puesto que el debido proceso
es impugnable a través de la acción de libertad, sólo en los casos de indefensión absoluta y

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 934


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o restricción a la libertad
física.

Tercer supuesto:

Si impugnada la resolución la misma es confirmada en apelación; empero, en lugar de activar


inmediatamente la acción libertad, decide voluntariamente, realizar una nueva petición ante la
autoridad ordinaria, tendiente a un nuevo análisis y reconsideración de su situación jurídica,
sea mediante una solicitud de modificación, sustitución, cesación de detención preventiva, etc.,
y la misma está en trámite, en esos casos, ya no es posible acudir a la jurisdicción
constitucional impugnando la primera o anterior resolución judicial, donde se emitió el auto de
vista, inclusive; por cuanto las partes de un proceso están impelidas de actuar con lealtad
procesal, de no ser así, se provocaría una duplicidad de resoluciones en ambas jurisdicciones, e
incidiría negativamente en el proceso penal de donde emerge la acción tutelar”.

En este entendido, y de acuerdo al presente caso de autos corresponde mencionar; el primer


supuesto, que establece, cuando antes de existir una imputación formal, tanto la Policía
Boliviana o la Fiscalía incurran en vulneración del derecho a la libertad y no se ha realizado la
comunicación del inicio de investigaciones, corresponde denunciar estos actos, al juez de
instrucción en lo Penal de turno; empero, si se hubiese cumplido con la comunicación del inicio
de investigaciones, corresponde denunciar estos actos a la autoridad jurisdiccional que ya
asumió el conocimiento del inicio de investigaciones.

III.3. Análisis del caso

III.3.1. De la actuación del Juez de garantías

La acción de libertad, ha sido interpuesta ante el Juez de Sentencia de turno, siendo


recepcionada por la distribuidora de causas del Tribunal Departamental de Justicia del Distrito
de La Paz a horas 10:53 el viernes 3 de febrero del 2012- tal cual se evidenció del sello de
recepción- se remitió la misma al Juzgado Segundo de Sentencia a horas 11:10, el mismo señaló
audiencia pública para el sábado 4 del citado mes y año horas 11:00, disponiendo la remisión de
los actuados al Juzgado de Instrucción en lo Penal de turno; asimismo, que la autoridad
demandada haga comparecer ante el referido juzgado a los ahora accionantes.

Para el desarrollo de la audiencia de la acción de libertad, asumió competencia Margot Perez


Montaño, Jueza Cuarta de Instrucción en lo Penal, quien como Jueza de garantías pronuncia la
Resolución 072/2012 de 4 de febrero.

De lo referido se tiene que, la Jueza Cuarta de Instrucción en lo Penal encontrándose de turno en


día sábado, asume conocimiento de la presente acción, en aplicación del art. 68.4 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), siendo en este caso competente para sustanciar la
presente acción y pronunciar la correspondiente resolución conforme se tiene referido en el
Fundamento III.1 reiterando al respecto que: “…cuando la acción de libertad sea planteada
ante las Salas penales o jueces de sentencia en la Capital de Departamentos y la audiencia de
acción de libertad a señalarse deba llevarse a cabo los días sábados, domingos o feriados, la
Ley de Tribunal Constitucional Plurinacional ha previsto en su art. 68.4 que la acción de
libertad sea tramitada ante el juez de instrucción cautelar, aspecto que vendría a constituir un
caso excepcional en el que un juez de instrucción en lo Penal de turno asumiría competencia
y por lo tanto podría constituirse en juez de garantías, solo en el caso referido…”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 935


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.3.2. Respecto de la subsidiariedad excepcional

En el presente caso, tal como se evidencia de las conclusiones y antecedentes, se tiene que el
Fiscal de Materia de la Unidad de Solución Temprana de la Fiscalía del Departamento de La
Paz, ha sido la autoridad que ha emitido la orden de aprehensión contra los accionantes en
aplicación del art. 226 del CPP; así se evidencia de las Resoluciones y orden de aprehensión de
2 de febrero del 2012.

Al respecto, existiendo varias denuncias contra los accionantes, e iniciada la investigación


preliminar, corresponde que los mismos puedan denunciar tal vulneración ante el Juez de
Instrucción en lo Penal, quien conoció el inicio de la investigación, para que en ejercicio de sus
facultades conferidas por los arts. 54. inc. 1) y 279 del CPP, realice el correspondiente control
jurisdiccional y se pronuncie sobre la legalidad o ilegalidad de la restricción al derecho a la
libertad.

Por lo expuesto, concurriendo el primer supuesto de la subsidiariedad excepcional, señalado en


el Fundamento Jurídico III.1, establecido por SC 0080/2010-R, entre otras, toda vez que los
accionantes no han agotado los mecanismos de la jurisdicción ordinaria, se debe denegar la
tutela solicitada sin ingresar al análisis de fondo de la causa.
En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la acción tutelar, ha actuado
correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la LTCPl,
en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 072/2012 de 4 de febrero cursante a fs. 29 y vta.,
dictada la Jueza Cuarta de Instrucción en lo Penal del departamento de La Paz, y en consecuencia
DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de fondo de la
problemática.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0116/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00084-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 03 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 23 a 25 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Fernando Barrientos Sotomayor en

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 936


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

representación de Gustavo Celso Velarde Carrillo contra Iris Justiniano, Jueza Segunda de
Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 7 de febrero de 2012, cursante de fs. 11 a 13, el accionante, expone
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 5 de noviembre de 2010, dentro del proceso penal que sigue el Ministerio Público a su
representado, por el supuesto delito de estelionato, la Jueza demandada ordenó su detención
preventiva, encontrándose recluido de manera ilegal por más de un año en el penal de
“Palmasola”, sin que a la fecha de presentación de esta acción, exista requerimiento conclusivo,
ni avance en las investigaciones; por lo que amparado en el presupuesto del art. 239 inc. 2) del
Código de Procedimiento Penal (CPP), solicitó la cesación de su medida cautelar impuesta, en
razón a que el tiempo de su detención excedió el mínimo legal de la pena establecida para el tipo
penal que se le juzga, señalándose audiencia para el 27 de enero de este año; sin embargo, ésta
fue suspendida a solicitud del Fiscal, quien alegó falta de notificación con setenta y dos horas de
anticipación para la realización del acto, pese a que la diligencia se realizó respecto a todas las
partes con antelación, a más que este aspecto no está previsto en la norma adjetiva penal; pedido
que fue deferido por la Jueza demandada, quien fijó nueva audiencia para el 6 de febrero del año
en curso, dilatando ilegalmente su detención.

Finalmente alega que, el 2 de febrero de 2012; es decir, a escasos cuatro días de que se lleve a
cabo la audiencia de cesación, la querellante presentó un memorial anunciando copatrocinio, lo
que suscitó que la Jueza demandada, alegando amistad con la abogada, se excusara a través de la
Resolución de 3 del citado mes y año, y suspendiera una vez más, mediante maniobras
dilatorias, la mencionada audiencia fijada para el 6 del indicado mes y año.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, estima lesionados los derechos de su representado, a la libertad de locomoción y


al debido proceso; citando al efecto los arts. “14”, 21.7, 109, “113, 115, 116, 117, 119”, de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes solicita se le conceda tutela, ordenando su inmediata libertad personal, así
como se declare ilegal la excusa formulada por la Jueza demandada.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 8 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 21
a 22 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 937


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Los abogados del accionante, ratificaron el tenor de la demanda, agregando a su pretensión que
se señale audiencia de cesación de detención preventiva lo más rápido posible.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Iris Justiniano, Jueza Segunda de Instrucción en lo Penal, mediante informe escrito cursante a fs.
20, señaló: a) El representado del accionante se encuentra detenido desde el 5 de noviembre de
2010, apersonándose recién en diciembre de 2011 para solicitar audiencia de cesación de
detención; b) Se señaló audiencia en tiempo rápido y oportuno, suspendiéndose la primera vez a
petición del agraviado, y luego, a solicitud del Fiscal, toda vez que no habría sido notificado
dentro del plazo prudencial de setenta y dos horas para hacer la revisión de las pruebas,
programándose nueva fecha; y, c) El 2 de febrero de 2012, se apersonó como abogada de la
parte civil, María del Rosario Espada Herbas, quien fuera su amiga íntima y, para que no exista
nulidad, se excusó del conocimiento de la causa.

I.2.3. Resolución

El Juez Tercero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, constituido
en Juez de garantías, dictó la Resolución 03 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 23 a 25 vta.,
por la cual concedió la acción de libertad, ordenando que el “Juez de la causa”, remita
inmediatamente los actuados al que corresponda reemplazarla -tomando en cuenta la excusa de
la Jueza Segunda de Instrucción en lo Penal-; debiendo señalarse audiencia dentro de las
veinticuatro horas de notificada esta Resolución. Esta decisión, se asumió bajo los siguientes
fundamentos: i) El imputado, solicitó audiencia de cesación a su detención preventiva, la que fue
suspendida de manera ilegal incurriendo en dilación injustificada, no obstante que debió ser
llevada a cabo con la mayor celeridad y prontitud debida; ii) La autoridad demandada, incumplió
su deber jurídico de realizar esta audiencia en el día y hora “señalada”, desconociendo que en
este trámite rige el principio de celeridad procesal, por el cual los jueces están en la obligación
de otorgar pronta y especial atención; iii) No es válida la excusa de que el Fiscal debió ser
notificado con setenta y dos horas de anticipación a la celebración de la audiencia, situación que
no está prevista en la ley, prolongando la consideración de la solicitud de cesación a la detención
preventiva del agraviado, incurriendo en dilación indebida que atenta contra su derecho a la
libertad; y, iv) Con relación al petitorio de declarar ilegal la excusa formulada por la autoridad
demandada, no corresponde su consideración al Juez de garantías, por cuanto el trámite y
resolución está regulada por el art. 318 del CPP.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. El 19 de diciembre de 2011, Celso Gustavo Velarde Carrillo, dentro del proceso penal que
le sigue el Ministerio Público, por el presunto delito de estelionato, solicitó audiencia para la
aplicación de procedimiento abreviado y alternativamente, la cesación de su detención
preventiva, por haber excedido más del mínimo legal previsto por el delito que se le procesa (fs.
1 a 5 vta.).

II.2. El 26 de enero de 2012, el Fiscal de Materia, solicitó la suspensión de audiencia de


cesación a la detención preventiva, arguyendo no haber sido notificado con setenta y dos horas
de anticipación, por tratarse de una notificación con documentación (fs. 7 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 938


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.3. Por memorial presentado el 2 de febrero de 2012, la parte querellante hizo conocer a la
Jueza Segunda de Instrucción en lo Penal, el copatrocinio de la abogada María del Rosario
Espada Herbas (fs. 9).

II.4. A través del Auto de 3 de febrero de 2012, la Jueza demandada se excusó del conocimiento
de la causa penal, en base a la causal establecida en el art. 316 inc. 11) del CPP, por tener
amistad íntima con la abogada copatrocinante de la parte denunciante (fs. 10).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El representado del accionante, alega la vulneración de sus derechos a la libertad y al debido


proceso, por cuanto tras solicitar la cesación de su detención preventiva, la Jueza ahora
demandada, suspendió la audiencia para su consideración con el sólo fundamento de que el
representante del Ministerio Público no fue notificado con setenta y dos horas de anticipación a
la celebración de la misma; y, programada una nueva fecha para la realización de este acto
procesal, tampoco pudo llevarse a cabo a consecuencia de la excusa de la Jueza; circunstancias
que prolongaron indebidamente la detención preventiva del impetrante. En consecuencia,
corresponde considerar, en revisión, si tales extremos son ciertos y si ameritan o no la protección
que brinda la presente acción.

III.1. Naturaleza jurídica, alcances y clasificación de la acción de libertad

El derecho a la libertad física, supone un derecho fundamental de carácter primario para el


desarrollo de la persona, entendimiento que se sustenta en la norma prevista por el art. 22 de la
CPE, pues en ella el Constituyente boliviano ha dejado expresamente establecido que la libertad
es inviolable y, respetarla y protegerla es un deber primordial del Estado Plurinacional.
Atendiendo esta misma concepción de protección es que creó una acción de defensa, exclusiva,
extraordinaria y sumarísima a fin de que el citado derecho goce de especial protección en casos
en que se pretenda lesionarlo o esté siendo lesionado.

El art. 125 de la Norma Fundamental, establece que la acción de libertad tiene por objeto tutelar
los derechos a la vida, a la libertad física y de locomoción, en los casos en que aquélla se
encuentre en peligro y cuando ésta sea objeto de persecución ilegal, indebido procesamiento u
objeto de privación en cualquiera de sus formas, pudiendo toda persona que considere
encontrarse en tales situaciones, acudir ante el juez o tribunal competente en materia penal y
solicitar se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las
formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad.

Del contenido de la disposición constitucional aludida, se concluye que tanto el recurso de


hábeas corpus instituido en la doctrina constitucional y en la jurisprudencia, así como la acción
de libertad, desarrollada por la actual Constitución Política del Estado, ha sido instituida como
una acción tutelar de triple carácter: preventivo, correctivo y reparador, reforzando la defensa
oportuna y eficaz, que tiene por finalidad el resguardo y protección de los derechos a la vida y la
libertad, tanto física como de locomoción, en favor de toda persona que creyere estar
ilegalmente perseguida, o indebidamente procesada o privada de libertad. Así, de acuerdo a la
jurisprudencia del Tribunal Constitucional, el ámbito de protección de la acción de libertad,
alcanza a los supuestos en que:

“a. El acto ilegal provoca la restricción del derecho a la libertad física (hábeas corpus
reparador);

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 939


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

b. El acto ilegal amenaza o perturba al derecho a la libertad física personal (hábeas corpus
restringido y preventivo);

c. Se agravan las condiciones de la libertad (hábeas corpus correctivo);

d. Existe amenaza al derecho a la vida vinculada al derecho a la libertad (hábeas corpus


instructivo); y, e. Existe una dilación indebida para resolver la situación jurídica de una
persona respecto a su derecho a la libertad física o personal (hábeas corpus traslativo o de
pronto despacho)” (SC 0802/2011-R de 30 de mayo, haciendo cita a su vez, de la SC
0044/2010-R de 20 de abril).

Este último supuesto, es decir, el hábeas corpus -ahora acción de libertad- traslativo o de pronto
despacho, queda implícito en el art. 125 de la CPE y fue reconocido por la jurisprudencia del
Tribunal Constitucional, a tiempo de tutelar los supuestos de demora en la celebración de las
audiencias de medidas cautelares (SSCC 1109/2004-R, 1921/2004-R); en los casos en que
existieron notificaciones ilegales con las resoluciones de medidas cautelares que lesionan el
derecho a la defensa, concretamente a recurrir, impidiendo que el tribunal superior revise la
resolución del inferior (SC 0826/2004-R de 26 de mayo); o cuando se incurrió en demora en la
efectividad de la libertad, pese a que el imputado cumplió con las medidas sustitutivas impuestas
(SSCC 1477/2004-R, 0046/2007-R, entre otras).

III.2. Sobre el principio de celeridad en el proceso penal

Como primer supuesto acto ilegal, el accionante, por su representado, denuncia la suspensión de
la audiencia de cesación a la detención preventiva por más de una vez. Al respecto, corresponde
señalar que la norma prevista por el art. 178 de la CPE, determina que: “La potestad de impartir
justicia emana del pueblo boliviano y se sustenta en los principios de independencia,
imparcialidad, seguridad jurídica, publicidad, probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo
jurídico, interculturalidad, equidad, servicio a la sociedad, participación ciudadana, armonía
social y respeto a los derechos” (las negrillas son nuestras). De igual manera, el art. 180.I de la
Norma Fundamental, dispone: “La jurisdicción ordinaria se fundamenta en los principios
procesales de gratuidad, publicidad, transparencia, oralidad, celeridad, probidad, honestidad,
legalidad, eficacia, eficiencia, accesibilidad, inmediatez, verdad material, debido proceso e
igualdad de las partes ante el juez” (negrillas agregadas).

En consecuencia, el principio de celeridad se encuentra plenamente establecido en la norma


suprema del Estado Plurinacional, que impone a quienes administran justicia el deber jurídico de
despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones indebidas; exigencia que se
hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad personal; toda vez que, tales
peticiones deben ser atendidas de forma inmediata si no existe una norma que establezca un
plazo, y si existe, debe ser cumplida estrictamente.

En el sistema universal de protección a los derechos humanos, el Pacto Internacional de


Derechos Civiles y Políticos, que forma parte del bloque de constitucionalidad, dentro de
nuestro ordenamiento jurídico establece que en un proceso, toda persona acusada de un delito
tendrá derecho en plena igualdad y como garantía mínima, “a ser juzgado sin dilaciones
indebidas”, art. 14.3 inc. c).

En el sistema interamericano de protección de los derechos humanos, la Convención Americana


sobre Derechos Humanos o Pacto de San José de Costa Rica, respecto al derecho a un proceso
sin dilaciones dispone: “Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 940
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,


establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal
formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil,
laboral, fiscal o de cualquier otro carácter” (art. 8.1).

En ese sentido, la solicitud de cesación de detención preventiva prevista por el art. 239 del CPP,
está regida por el principio de celeridad procesal. Así, la SC 0078/2010-R de 3 de mayo, ha
dejado establecido que: “Bajo la égida que el derecho a la libertad ocupa un lugar importante,
junto a la dignidad humana en el catálogo de derechos civiles como parte integrante a su vez de
los derechos fundamentales, tal cual lo establece el art. 22 de la CPE al señalar que: 'La
dignidad y la libertad de la persona son inviolables. Respetarlas y protegerlas es deber
primordial del Estado', norma que debe ser interpretada en base a los valores de la misma
Constitución, la cual en el art. 8.II establece que el Estado se sustenta en los valores de
dignidad y libertad, entre muchos otros; se debe tener en cuenta que la restricción o límite al
derecho a la libertad física en materia penal, con carácter provisional o cautelar, conforme a
los requisitos constitucionales y legales, tienen naturaleza instrumental y por ende modificable.

De acuerdo al sistema procesal penal vigente, plasmado en la Ley 1970 o Código de


Procedimiento Penal, el art. 239, establece los casos en que procede la cesación de la detención
preventiva, empero, el presente análisis no se aboca a los casos particulares, a ninguno de los
incisos del art. 239 del CPP, ni a los aspectos positivos o negativos, legales o doctrinales, o a su
interpretación o efectos, sino sólo y exclusivamente a aspectos generales como es la celeridad
en su trámite una vez efectuada la solicitud.

En ese sentido, es preciso puntualizar que la detención preventiva, no tiene por finalidad la
condena prematura, por cuanto la presunción de inocencia, sólo es desvirtuada ante un fallo
condenatorio con calidad de cosa juzgada, por ello su imposición como medida precautoria
está sujeta a reglas, como también su cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no
existe una norma procesal legal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe
realizarse la audiencia de consideración, corresponde aplicar los valores y principios
constitucionales, previstos en el ya citado art. 8.II de la CPE, referido al valor libertad
complementado por el art. 180.I de la misma norma constitucional, que establece que la
jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad entre otros; motivo
por el cual toda autoridad jurisdiccional que conozca una solicitud de un detenido o privado de
libertad, debe tramitar la misma, con la mayor celeridad posible, y dentro de los plazos legales
si están fijados, y en un plazo razonable, si no está establecido por ley. De no ser así, tal
actuación procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del detenido y en
consecuencia repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por la sola
privación de libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que
necesariamente se deba deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado
oportunamente a fin de que obtenga una respuesta positiva o negativa”.

La SC 0056/2010-R de 27 de abril, ha dejado establecido que: “…el tratamiento que debe darse
a las solicitudes en las que se encuentre de por medio el derecho a la libertad, entre ellas, la
cesación de la detención preventiva, debe tener un trámite acelerado y oportuno, pues de no
hacerlo podría provocarse una restricción indebida de este derecho, cuando, por un lado, exista
una demora o dilación indebida en su tramitación y consideración, o en su caso, cuando existan
acciones dilatorias que entorpezcan o impidan que el beneficio concedido pueda efectivizarse
de inmediato, dando lugar a que la restricción de la libertad se prolongue o mantenga más de lo
debido. Esto en los casos, en los que por razones ajenas al beneficiario, la cesación de la
detención preventiva u otro beneficio, no puede concretarse debido a los actos de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 941
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

obstaculización o dilación innecesaria, que originan que el solicitante, no obstante de haber


sido favorecido por un beneficio que le permite obtener su libertad, se ve impedido de
accederla, permaneciendo indebidamente detenido, situación por la cual se abre la protección
que brinda el hábeas corpus ante la ausencia de celeridad en efectivizarse el beneficio
otorgado.
En consecuencia, la celeridad en la tramitación, consideración y concreción de la cesación de
la detención preventiva u otro beneficio que tenga que ver con la libertad personal no sólo le es
exigible a la autoridad judicial encargada del control jurisdiccional, sino también a todo
funcionario judicial o administrativo que intervenga o participe en dicha actuación y de quien
dependa para que la libertad concedida se haga efectiva”.

Consiguientemente, se concluye que el tratamiento a darse a las solicitudes en la que se


encuentre de por medio el derecho a la libertad, debe tener un trámite rápido y oportuno, pues de
no hacerlo, podría provocarse una dilación indebida de este derecho.

III.3. Análisis del caso concreto

El accionante, manifiesta que su representado está detenido preventivamente desde el 5 de


noviembre de 2010 y que cumplió más del mínimo legal de la pena establecida para el delito de
estelionato por el que se le juzga; y que habiendo solicitado la cesación de su detención
preventiva el 19 de diciembre de 2011, se señaló audiencia para el 5 de enero de 2012, la que fue
suspendida a solicitud del encausado. Seguidamente se fijó nueva fecha para el 27 de ese mes y
año, que tampoco se llevó a cabo, esta vez a petición del Fiscal, quien alegó no haber sido
notificado con setenta y dos horas de anticipación; programándose otra para el 6 de febrero de
igual año, la que tampoco se realizó en razón de la excusa formulada por la Jueza demandada,
sustentada en una supuesta amistad íntima con la abogada patrocinante de la parte querellante.

Ahora bien, respecto a la suspensión de la audiencia de cesación de detención preventiva a


solicitud del representante del Ministerio Público, se debe tener presente lo dispuesto respecto a
los defectos absolutos señalados en art. 169 del CPP, que no son susceptibles de convalidación,
normativa que no hace mención a que la ausencia del Ministerio Público en la celebración de la
audiencia de cesación a la detención preventiva constituya un acto nulo; aspecto que no fue
considerado por la autoridad demandada, por cuanto no precisó con claridad la necesidad
inexcusable de la presencia del Fiscal a efecto de considerar la solicitud planteada por el
imputado; ante lo cual, resulta dilatorio el hecho de haber diferido la consideración de la
cesación por ese motivo, cuando ello no implicaba una suspensión. En ese sentido, la SC
0536/2005-R de 18 de mayo, estableció: “… el juzgador demandado al suspender la audiencia
por ausencia de la autoridad fiscal, cuya presencia no es imprescindible en este tipo de
actuaciones y declarar un cuarto intermedio hasta una nueva fecha, sin pronunciarse sobre la
petición del recurrente, ha demorado injustificadamente el trámite y resolución de dicha
solicitud de cesación de detención preventiva, en directa infracción de la normativa citada,
violando con ello el derecho a la libertad del recurrente y desconociendo que a toda petición de
esta naturaleza, en la que se encuentra en juego la libertad de una persona, corresponde darle
un tratamiento inmediato y preferente” (las negrillas nos pertenecen).

Conforme a lo señalado precedentemente, a la Jueza encargada del control jurisdiccional, le


correspondía fijar la audiencia de cesación a la detención preventiva dentro de un plazo
razonable, mismo que de acuerdo a la SC 0110/2012 de 27 de abril, al no haber sido establecido
expresamente por el legislador, ha sido fijado dentro de los tres días hábiles como máximo, a
objeto de no incurrir en lesiones al derecho a la libertad del imputado. En este entendido, el
plazo razonable para la realización de la audiencia de análisis, consideración y resolución
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 942
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del beneficio de la cesación de la detención preventiva, será el término máximo antes


señalado, incluidas las notificaciones pertinentes, lo contrario, constituye vulneración del
derecho a la libertad por retardación de justicia, en el entendido de que los jueces no pueden
obrar contra los derechos fundamentales de las personas privadas de libertad (art. 73 y ss. de la
CPE).
Por otra parte, ante la inexistencia de un plazo específico determinado por ley para que el juez
señale día y hora de audiencia para considerar la cesación de la detención preventiva, es
necesario establecer que el memorial de solicitud debe ser providenciado indefectiblemente
dentro de las veinticuatro horas de su presentación, conforme dispone el art. 132.1 del CPP, al
tratarse de una providencia de mero trámite. En este entendido, habrá lesión del derecho a la
libertad cuando exista demora o dilación indebida al no emitirse el decreto pertinente de
señalamiento de este actuado procesal dentro del referido plazo, bajo sanción disciplinaria a
imponerse al juzgador en caso de incumplimiento.

Asimismo, cabe tener presente que el Estado Plurinacional de Bolivia, a tenor del art. 1 de la
CPE, se funda en la pluralidad y el pluralismo político, económico, jurídico, cultural y
lingüístico, respetando y reafirmando los valores de nuestra cultura ancestral, tal como el “ama
qhilla”, palabra quechua que traducida al español significa “no seas flojo” y, es por ello que
nuestra Norma Fundamental en su art. 8.I la constitucionaliza como principio ético-moral de la
sociedad plural, al igual que el “ama llulla” y “ama suwa”, con el objeto de que la población
encuentre en el trabajo y en el cumplimiento de sus deberes una labor grata, tal como lo
conceptuaron nuestros antepasados y las culturas todavía vigentes que sancionan drásticamente a
los infractores, lo que denota que los operadores de justicia tienen la obligación de respetar y
cumplir la precitada norma constitucional, conforme a la línea jurisprudencial trazada en la SC
0015/2012 de 16 de marzo. Por otra parte, respecto al principio de dirección judicial del proceso
afirmó: “…el deber del juez de impulsar de oficio los procesos, conforme a sus facultades
procesales de dirección, que guardan armonía con el principio de dirección judicial, que se
complementa con el de impulso procesal o impulso de oficio, que -a su vez- se manifiesta en una
serie de potestades que las normas confieren al juez operador, como intérprete de la norma
para conducir y hacer avanzar autónomamente el proceso, sin necesidad de petición de parte y
sin que ello signifique coartar el derecho de los sujetos procesales a dinamizar y ser los
propulsores naturales del proceso”.

Por último, en cuanto al petitorio de declarar ilegal la excusa planteada por la Jueza demandada,
no corresponde su consideración, por cuanto el trámite y resolución de la excusa está regulado
por el art. 318 del CPP, correspondiendo al juez que deba reemplazarla establecer si esta es legal
o ilegal.

En consecuencia, el Juez de garantías al haber concedido la tutela, ha actuado correctamente

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de conformidad con el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve:

1º APROBAR la Resolución 03 de 8 de febrero de 2012, cursante de fs. 23 a 25 vta.,


pronunciada por el Juez Tercero de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa
Cruz; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, respecto a la dilación en el trámite
de solicitud de cesación de la detención preventiva.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 943


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

2º Se llama la atención a la Jueza Segunda de Instrucción en lo Penal por no haber dado estricto
cumplimiento a la celeridad con la que debe ejercer sus funciones conforme a la Constitución
Política del Estado, Tratados Internacionales y la norma procesal penal vigente.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0117/2012


Sucre, 2 mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00194-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 03/2012 de 17 de febrero, pronunciada dentro de la acción de libertad


interpuesta por René Sauciri Choque en representación sin mandato de Blanca Alicia Flores Claros
Vda. de Rojas contra Erwin Jiménez Paredes, Juez Cuarto de Instrucción Penal en suplencia
legal de su similar Segundo, ambos del departamento de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por memorial presentado el 16 de febrero de 2012, cursante de fs. 4 a 5 vta. de obrados, el accionante
por su representada señaló que se encuentra con detención preventiva desde los primeros días de
mayo de 2011, en el Centro de Rehabilitación Santa Cruz “Palmasola”, y habiendo presentado
memorial de solicitud de cesación a la detención preventiva, éste no fue resuelto, además señala que
el 11 del mismo mes y año, nuevamente solicitó audiencia de cesación a la detención preventiva.

No obstante a su reiterada solicitud, el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, Erwin Jiménez


Paredes, ahora demandado, no decreto estos memoriales presentados en los que pidió audiencia
conclusiva y solicitud de cesación, dilatando innecesariamente la situación de privación de
libertad de su representada con notoria retardación y denegación de justicia.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, señala que se lesionaron el derecho de su representada a la libertad, sin citar la


norma constitucional que considera infringida.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela, con costas, daños y perjuicios; sin especificar la tutela solicitada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 944


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
11 a 12 de obrados, en presencia de las partes, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante ratifico los fundamentos de su demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Erwin Jiménez Paredes, Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal y cautelar, presento informe
escrito cursante a fs. 9 y vta., señalando lo siguiente: a) La representada del accionante se
encuentra completamente “equivocada al indicar que mi autoridad no hubiera señalado
audiencia de cesación y audiencia conclusiva”, indicando que con dicha situación se estaría
vulnerando el debido proceso y la presunción de inocencia, por otro lado indica que todos los
memoriales presentados por los sujetos procesales han sido oportunamente resueltos; b) Así
también, “sin ningún fundamento jurídico solicita se declare la nulidad del acto motivadamente
de la privación de libertad, desconociendo por completo el fin u objetivo de la presente acción”,
como si fuera el juez o tribunal de garantías, un tribunal de alzada, lo que es peor pide que se
disponga su libertad; y, c) Al no ajustarse la presente acción tanto al objeto como las causas de
procedencia establecidos en los arts. 65 y 66 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP) y 125 de la Constitución Política del Estado (CPE), se rechace la acción de libertad.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez Séptimo de Sentencia y Partido en lo Penal Liquidador,


constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 03/2012 de 17 de febrero, cursante de
fs. 12 vta. a 14 vta., denegando la tutela; bajo los siguientes fundamentos: 1) El control
jurisdiccional de cualquier proceso ordinario, compete única y exclusivamente al juez natural; 2)
Llama la atención que el cuaderno procesal no esté foliado y se encuentra en completo desorden;
sin embargo se evidencia el escrito de la representada del accionante de 1 de febrero de 2012,
por el que solicita audiencia de cesación a la detención preventiva, y en forma inmediata y
correlativa cursa decreto de 2 del mismo mes y año, señalando la audiencia correspondiente para
el 28 de ese mes y año a horas 11:00; y, 3) Al existir señalamiento de audiencia de cesación a la
detención preventiva para una fecha próxima, se debe denegar la tutela.

Asimismo, el Juez de garantías dispuso: i) Que el Juez demandado haga notificar de forma
inmediata con el decreto de señalamiento de audiencia de la detención preventiva; y, ii) Se de
cumplimiento a las previsiones contenidas en los arts. 130 y 160 del Código de Procedimiento
Penal (CPP).

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Por memorial de 31 de enero de 2012, cursante a fs. 3 la representada del accionante
solicitó al Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal en suplencia de su similar Segundo, audiencia
de cesación a la detención preventiva y celeridad al debido proceso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 945


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. Por oficio 100/2012 de 17 de febrero, el Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal, remite
expediente en original al Juez de garantías, del cual no se hizo conocer, ni se anexo a la presente
acción ningún actuado en revisión ante el Tribunal Constitucional Plurinacional (fs. 10).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración del derecho a la libertad de su representada y la


reparación de los defectos legales, por parte del Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal en
suplencia de su similar Segundo, al no haberse pronunciado sobre la reiterada solicitud de
señalamiento de audiencia de cesación a la detención preventiva. En consecuencia, en revisión
de la Resolución dictada por el Juez de garantías, corresponde dilucidar, si tales extremos son
evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1.Naturaleza jurídica de la acción de libertad

La acción de libertad, ha sido instituida por la Constitución Política del Estado en sus arts. 125 y
ss., como una medida de defensa de los derechos y garantías a la libertad y a la vida, derechos
que son reconocidos por la misma Ley Fundamental y que son inherentes a todos los estantes y
habitantes del Estado Plurinacional de Bolivia, mismos que no pueden ser vulnerados o
infringidos sin una justa razón o previo juzgamiento.

Asimismo, la normativa contenida en los arts. 89 y siguientes de la Ley del Tribunal


Constitucional (LTC), determinan que quien creyere estar arbitraria e indebida o ilegalmente
perseguido, detenido o preso, podrá acudir ante la jurisdicción constitucional buscando la
reparación que pudiera estar afectando su derecho; en tal sentido la acción de libertad ha sido
instituida por el art. 125 de la CPE, como una acción tutelar a favor de toda persona que
considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente
procesada o privada de libertad personal, para que pueda acudir ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitar se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida,
se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad; entendimiento
que se encuentra establecido en la SC 0011/2010-R de 6 de abril, cuando señala: "La acción de
libertad, es una acción jurisdiccional de defensa que tiene por finalidad proteger y/o restablecer
el derecho a la libertad física o humana, y también el derecho a la vida, si es que se halla en
peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad personal, sea disponiendo el cese de la
persecución indebida, el restablecimiento de las formalidades legales y/o la remisión del caso al
juez competente, la restitución del derecho a la libertad física, o la protección de la vida misma,
motivo por el cual se constituye en una acción tutelar preventiva, correctiva y reparadora de
trascendental importancia que garantiza como su nombre lo indica, la libertad, derecho
consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE".

III.2. Respecto a la presentación de la prueba en la acción de libertad, su valoración por el


juez o tribunal de garantías y de revisión ante el Tribunal Constitucional Plurinacional

La jurisdicción constitucional, se ha pronunciado a través de sus numerosos y uniformes fallos,


respecto a que, la determinación del tribunal o juez de garantías debe obedecer a la certidumbre
sobre si en efecto se ha violado o está amenazado el derecho a la libertad de locomoción,
empero, también debe existir esa certidumbre traducida en pruebas respecto a la intervención de
la autoridad en los actos restrictivos de libertad que se denuncian a través de la acción tutelar; es
decir, que el demandado tenga legitimación pasiva por haber sido quien cometió o ejecutó el
acto ilegal, toda vez que debe existir esa coincidencia entre la autoridad que presuntamente
causó la violación a los derechos y aquella contra quien se dirige la acción, como lo ha
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 946
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecido la jurisprudencia constitucional, entre otras en la SC 1651/2004-R de 11 de octubre,


que señaló: “La uniforme jurisprudencia constitucional dictada por este Tribunal ha
establecido el principio general según el cual, para la procedencia del hábeas corpus es
ineludible que el recurso sea dirigido contra el sujeto que cometió el acto ilegal o la omisión
indebida, o contra la autoridad que impartió o ejecutó la orden que dio lugar a la persecución,
aprehensión, detención, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales, su inobservancia
neutraliza la acción tutelar e impide a este Tribunal ingresar al análisis de fondo de los hechos
denunciados, ello debido a la falta de legitimación pasiva, calidad que de acuerdo a lo
sostenido por la SC 0691/2001-R, de 9 de julio reiterada en las SSCC 0817/2001-R, 0139/2002-
R, 1279/2002-R y otras, se adquiere por la coincidencia que se da entre la autoridad que
presuntamente causó la violación a los derechos y aquélla contra quien se dirige la acción”.
Por otro lado, la SC 0044/2010-R de 20 de abril, señaló que: "…la Constitución Política vigente
acentúa algunas de las características anotadas: 1. El informalismo, pues actualmente se
amplía la posibilidad de presentación oral de la acción de libertad, que antes estaba reservada
sólo a los supuestos en que la persona fuera menor de edad o incapacitada, analfabeta o
notoriamente pobre y; 2. La inmediación, ya que; la CPE señala que la autoridad judicial, una
vez presentada la acción, debe disponer que el accionante sea conducido a su presencia o
acudir al lugar de la detención, última posibilidad que no estaba contemplada en la
Constitución abrogada y que es fundamental para comprobar las condiciones en que la persona
se encuentra privada de libertad, especialmente cuando existe denuncia de torturas, tratos
crueles, inhumanos o degradantes, o si se ha vulnerado el derecho a la integridad física o existe
amenaza a su vida" . De igual forma la SC 0066/2010-R de 3 de mayo, referida al principio de
informalismo y a la falta de presentación de pruebas en la acción de libertad, señaló que: "…uno
de los principios que rige este recurso es el de informalidad, pero se entiende que dicho criterio
no alcanza a la obligación que tiene la accionante de presentar la prueba necesaria que
acredite su pretensión”.

Sin embargo, a la jurisprudencia antes citada, se debe considerar que, en casos como en el
presente la representada del accionante solicitó que se remita el expediente del proceso penal
ante el Juez de garantías, valorando éste el legajo procesal y las pruebas existentes empero,
dicha prueba no fue puesta en conocimiento de este Tribunal Constitucional Plurinacional a
pesar de haber solicitado el accionante dicho extremo (fs. 14). Hecho que llama la atención, toda
vez que del acta de audiencia se establece la existencia de irregularidades del expediente y la
falta de notificación con la Resolución de señalamiento de audiencia de medidas cautelares por
parte del Juez demandado. Por consiguiente, se establece y modula el entendimiento respecto a
la presentación de la prueba en la acción de libertad, señalado que se puede y debe remitir ante
este Tribunal Constitucional Plurinacional, en fotocopia simple el proceso o partes del proceso
principal, los mismos que deberán ser refrendadas por el juez o tribunal de garantías
constitucional. Debiendo para ello como requisito solicitar de manera expresa el accionante
dicho extremo en su caso señalar las partes más importantes del proceso. Debiendo el
accionante correr con los gastos ocasionados por las fotocopias.

III.3. De la cesación de la detención preventiva y las subreglas para determinar el acto


dilatorio

En cuanto a la tramitación de las solicitudes de cesación de la detención preventiva, es preciso


puntualizar que esta medida cautelar no tiene por finalidad la condena prematura, por cuanto la
presunción de inocencia, sólo es desvirtuada ante un fallo condenatorio con calidad de cosa
juzgada, por ello su imposición como medida precautoria está sujeta a reglas, como también su
cesación, lo cual implica el trámite a seguir; y si bien no existe una norma procesal legal que
expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe realizarse la audiencia de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 947
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

consideración, corresponde aplicar los valores y principios constitucionales, previstos en el art.


8.II de la CPE, referido al valor libertad complementado por el art. 180.I de la misma norma
constitucional, que establece que la jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal
de celeridad entre otros; motivo por el cual, toda autoridad jurisdiccional que conozca una
solicitud de un detenido o privado de libertad, debe tramitar la misma, con la mayor celeridad
posible, y dentro de los plazos legales si están fijados, y en un plazo razonable, si no está
establecido por ley.

De no ser así, tal actuación procesal provocaría efectos dilatorios sobre los derechos del detenido
y en consecuencia repercute o afecta a su libertad que de hecho ya está disminuida por la sola
privación de libertad en que se encuentra, sin que este razonamiento implique que
necesariamente se deba deferir a su petición, sino, se refiere a que sea escuchado oportunamente
a fin de que obtenga una respuesta positiva o negativa. Así, en la SCP 0110/2012 se indica que
“Tratándose de señalamiento de día y hora de audiencia para considerar este beneficio, debe
ser conceptuada como un termino brevísimo, de tres días hábiles como máximo, pues el
imputado se encuentra privado de su libertad. En este entendido, el plazo razonable para la
realización de la audiencia de análisis, consideración y resolución del beneficio de la cesación
de la detención preventiva, será el término máximo antes señalado, incluidas las
notificaciones pertinentes, lo contrario constituye vulneración del derecho a la libertad, en el
entendido en que los jueces no pueden obrar contra los derechos fundamentales de las personas
privadas de libertad (art. 73 y ss de la CPE), bajo el argumento de existencia de sobrecarga
procesal, para justificar una negligencia e incumplimiento de un deber de servicio a la
sociedad.

Por otra parte, ante la inexistencia de un plazo especifico determinado por ley para que el juez
señale día y hora de audiencia para considerar la cesación de la detención preventiva, es
necesario establecer que el memorial de solicitud, debe ser providenciado indefectiblemente
dentro de las veinticuatro horas de su presentación, conforme dispone el art. 132 inc. 1) del
CPP, al tratarse de una providencia de mero tramite. En este entendido, habrá lesión del
derecho a la libertad cuando existe demora o dilación indebida al no emitirse el decreto
pertinente de señalamiento de este actuado procesal dentro del referido plazo, bajo sanción
disciplinaria a imponerse al juzgador en caso de incumplimiento.

Lo anterior, constituye una modulación de la sub regla establecida en el inc. b) del Fundamento
Jurídico III.3 de la SC 0078/2010-R de 3 de mayo, en cuanto al plazo para fijar audiencia, el
que queda determinado según lo señalado supra; vale decir tres días hábiles” (las negrillas son
nuestras).

III.4. Del caso concreto

Se establece que el propio Juez de garantías ordenó que se notifique a la accionante sobre la
Resolución de señalamiento de audiencia a la detención preventiva de 2 de febrero de 2012,
siendo interpuesta la acción el 16 del mismo mes y año, y toda vez que debe ser providenciado
el memorial de solicitud dentro de las veinticuatro horas, no ha obrado el Juez conforme a
derecho; asimismo, al haberse emitido la Resolución de 2 del citado mes y año por el que se fija
la fecha de la audiencia correspondiente para el día 28 de febrero de 2012 a horas 11:00, es
decir, a más de veinte días de interpuesta la solicitud de audiencia de cesación a la detención
preventiva, se ha vulnerado los derechos de la representada del accionante conforme se
desarrollo en el punto III.3 de la presente Sentencia.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 948


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por los fundamentos expuestos, el Juez de garantías al “denegar” la acción de libertad, ha


actuado en forma incorrecta.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
en revisión, resuelve:

1º REVOCAR la Resolución 03/2012 de 17 de febrero, cursante de fs. 12 vta. a 14 vta.,


pronunciada por el Juez Séptimo de Sentencia y Partido en lo Penal Liquidador del
departamento de Santa Cruz y; en consecuencia, CONCEDER la tutela sin disponer la libertad.

2º Remitir antecedentes ante el Consejo de la Magistratura, por la reincidencia del Juez


demandado.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0118/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de libertad
Expediente: 00143-2012-01-AL
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 02/2012 de 14 de febrero cursante a fs. 101 a 103 vta., pronunciada dentro
de la acción de libertad interpuesto por el menor NN contra Norka Fuentes Aspiazu, Jueza
Segunda de Partido Mixto, Niño, Niña y Adolescente de la localidad de Guayaramerín del
departamento de Beni.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 13 de febrero de 2012, cursante a fs. 9 y vta., el accionante expresa
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Refiere, que el 6 de diciembre de 2011 fue aprehendido por funcionarios del Ministerio Público y
posteriormente detenido preventivamente por orden de Norka Fuentes Aspiazu, Jueza Segunda de
Partido Mixto, Niño, Niña y Adolescente de Guayaramerín; en esa situación, estando detenido por
más de 45 días, en aplicación de la última parte del art. 233 del Código Niño, Niña y Adolescente
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 949
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

(CNNA), solicitó audiencia para consideración a su detención preventiva, que se efectuó el 9 de


febrero de 2012. En la audiencia señalada, la autoridad ahora demandada, injusta e indebidamente
negó la cesación de su detención preventiva con el argumento que su persona no había demostrado
domicilio, pese a que su abogado había aclarado que el art. 233 del CNNA en su última parte
señalaba que el menor infractor sólo podía estar detenido preventivamente por 45 días; por lo que,
con esa Resolución, considera que la autoridad demandada ha vulnerado su derecho a la libertad por
encontrarse injustamente detenido.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante denuncia la vulneración de su derecho a la libertad de locomoción, sin citar


ninguna norma de la Constitución Política del Estado.

I.1.3. Petitorio

Solicita se ordene su inmediata libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

La audiencia pública se realizó el 14 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
98 a 100, produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante, en audiencia, asistido de su abogado ratificó los fundamentos de su demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

A través de informe escrito cursante a fs. 97 y vta.; Mirtha Norka Fuentes Aspiazu, Jueza
Segunda de Partido Mixto Niño, Niña y Adolescente de Guayaramerín, argumentó lo siguiente:
a) Tome conocimiento del proceso infraccional instaurado en contra del ahora accionante, por el
delito de violación agravada de una niña, previsto en el art. 308 Bis en relación al 310 ambos del
Código Penal (CP), siendo la víctima de violación su hermana menor de 10 años de edad,
seguido por el Ministerio Público a denuncia de Judith Rojas Orellana, no habiendo vulnerado el
derecho a la libertad del accionante; b) El adolescente, infractor, cuenta con 15 años de edad,
por lo que estuviera gozando de la protección de sus derechos y garantías a través del Código
Niño, Niña y Adolescente, ley especial creada con el fin de regular la protección de los menores
que no han llegado a la edad de la imputabilidad; c) El accionante, en su memorial de demanda,
no hace una relación exacta y real de los hechos, se limita a mencionar una supuesta vulneración
sin acompañar prueba alguna, que hace inviable lo pretendido; y, d) En el caso presente, existe
la subsidiariedad ya que no se ha hecho uso de los medios ordinarios de defensa que resultan
idóneos para la tutela del derecho a la libertad, tal cual establece la SC 0007/2010-R de 6 de
abril que se remite a la SC 0160/2005-R de 23 de febrero.

A su vez, la representante de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y el Ministerio Público,


sin ser autoridades demandadas, por tratarse del caso de menores, concurrieron a la audiencia de
acción de libertad y, en la misma, al estar detenido el menor infractor en un centro de detención
de mujeres destinados a personas adultas y no así en un centro especializado de menores,
observando lo dispuesto por el art. 233 del CNNA, solicitaron se declare procedente la acción de
libertad solicitada por el accionante.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 950


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Partido Mixto, Niño, Niña y Adolescente de la localidad de Guayaramerín


del departamento de Beni, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 02/2012 de
14 de febrero, cursante de fs. 101 a 103 vta., denegando la tutela, con los siguientes
argumentos: 1) Si bien el art. 233 del CNNA, en su parte final señala, que en ningún caso se
podrá imponer la detención preventiva por más de 45 días a un menor y que en todo caso el juez
deberá analizar si es posible sustituir la detención preventiva por otra medida más favorable, ello
conlleva a afirmar que, la norma no es imperativa, si no facultativa, ya que permite al juez en
base a un análisis y razonamiento previo, la posibilidad de considerar la aplicación de una
medida más favorable; por ello, en el presente caso esos factores y tomando en cuenta que la
víctima es su propia hermana, de 10 años de edad y por consiguiente, también menor de edad y
que comparte el mismo domicilio con el hoy accionante, resulta inverosímil tener que disponer
en esa situación una medida sustitutiva y ordenando su arresto domiciliario en el inmueble
donde también vive la víctima, en el cual ambos (la menor y demandado) estarían presentes todo
el tiempo; 2) El accionante, por medio de sus padres, tutores, defensores o alguna institución
encargada de defender los derechos de menores, a tiempo de solicitar una medida sustitutiva a su
detención, tenían la obligación de acreditar fehacientemente el domicilio donde podría cumplir
el arresto domiciliario solicitado, sin afectar los derechos de la víctima, al no haberlo hecho,
resulta inviable acoger su pretensión; y, 3) Los postulados del art. 125 de la Constitución
Política del Estado no se encuentran vulnerados, ya que el accionante no ha demostrado que su
derecho a la vida está en peligro, que esté ilegalmente perseguido, o que esté indebidamente
procesado o privado de libertad.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

II.1. Mediante memorial de 30 de enero de 2012 (fs. 78), el menor NN, solicita cesación de su
detención preventiva, pidiendo se le conceda el arresto domiciliario.

II.2. La Jueza Segunda de Partido Mixto, Niño, Niña y Adolescente de Guayaramerín, en


audiencia de 9 de febrero de 2012 emitió la Resolución 02/2012 (fs. 96 y vta.) por el que
rechazó la solicitud de cesación a la detención preventiva, por no haberse justificado en
audiencia el tiempo de su detención preventiva, ni haber acreditado el lugar del domicilio donde
pueda cumplir el adolescente el arresto domiciliario solicitado.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante sostiene que la autoridad judicial demandada, vulneró su derecho a la libertad, porque al
ser menor de edad no observó lo dispuesto en la última parte del art. 233 del CNNA, por el que no
puede estar detenido por más de 45 días. En consecuencia, corresponde analizar, en revisión, si los
argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La subsidiariedad excepcional de la acción de libertad, no es aplicable en el caso de


menores de edad

Respecto a este tema, la SC 1147/2011-R de 19 de agosto, ha establecido lo siguiente: “…la


subsidiariedad con carácter excepcional del recurso de Acción de Libertad, instituida en la SC
0160/2005-R, de 23 de febrero, cuando existen medios de defensa eficaces y oportunos para
resguardar el derecho a la libertad supuestamente lesionado, a los cuales el afectado deberá
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 951
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

acudir en forma previa y solamente agotados tales medios de defensa y ante la persistencia de
la lesión, se podrá acudir a la jurisdicción constitucional, invocando la tutela que brinda la
acción de libertad, no es aplicable a los supuestos en los que menores de 16 años, considerados
menores infractores, se vean involucrados en la presunta comisión de delitos, por cuanto en
correspondencia con el régimen especial de protección y atención que el Estado y la sociedad
deben garantizar a todo niño, niña y adolescente, éstos se hallan bajo la protección y
regulación de las disposiciones del Código Niño, Niña y Adolescencia, cuyas normas son de
orden público y de aplicación preferente; que a diferencia de las normas previstas por el
Código de Procedimiento Penal, no existe un medio de impugnación expedito e inmediato
contra las resoluciones que restrinjan la libertad del menor detenido; en cuyo mérito,
corresponde ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada y determinar si la
autoridad recurrida incurrió en los actos y omisiones denunciados de ilegales que afectan el
derecho a la libertad del representado del actor, menor de edad, quien se encontraría en
detención preventiva…”; en consecuencia, conforme a la sentencia constitucional citada, no
corresponde hacer consideración respecto a la subsidiariedad que hubiere advertido la autoridad
accionada, cuando señala “…que en el presente caso existe la subsidiariedad, porque no se ha
hecho uso de los medios ordinarios de defensa que resultan idóneos para la tutela del derecho a
la libertad…”, sino por el contrario ingresar al análisis del fondo de la presente acción y
determinar si se vulneró el derecho a la libertad del menor ahora accionante.

III.2. Marco constitucional y legal sobre la protección de los derechos de la niñez y


adolescencia

El art. 58 de la CPE, considera niña, niño o adolescente a toda persona menor de edad, asimismo
refiere que, las niñas, niños y adolescentes son titulares de los derechos reconocidos en la
Constitución Política del Estado, con los límites que se han establecidos en ella.

Por su parte el art. 60 de la CPE, refiere: “Es deber del Estado, la sociedad y la familia
garantizar la prioridad del interés superior de la niña, niño y adolescente, que comprende la
preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir protección y socorro en cualquier
circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios públicos y privados, y el acceso a una
administración de justicia pronta, oportuna y con asistencia de personal especializado”.

III.3.Detención y aprehensión de menores infractores

La Convención de Naciones Unidas Sobre los Derechos del Niño de 20 de noviembre de 1989,
en su art. 37 incs. b) y d), dispone que los niños no podrán ser privados de su libertad de manera
arbitraria e ilegal, y que en caso de procederse a su detención, encarcelamiento o
aprisionamiento como último recurso y por el menor tiempo posible, deberá obrarse conforme a
ley, prestándole toda la asistencia jurídica o de otra índole que sea necesaria, asegurándole un
acceso pronto a la justicia que le permita impugnar ante autoridad competente su privación de
libertad en busca de una decisión rápida, eficaz e imparcial.

Por su parte, el art. 221 del CNNA, considera infracción a la conducta tipificada como delito en
la ley penal, en la que incurre como autor o participe un adolescente y de la cual emerge una
responsabilidad social. El juez de la niñez y adolescencia es el único competente para conocer
estos casos en los términos previstos por el mencionado Código, dicha previsión será aplicada,
conforme la disposición contenida en el art. 222 de la misma norma, a los adolescentes
comprendidos entre los doce a dieciséis años al momento de la comisión del ilícito, siendo
pasibles a las medidas socio-educativas señaladas en el art. 237 del CNNA.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 952


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.4.De la competencia de los jueces y tribunales en acciones de libertad.

Respecto a la competencia para conocer las acciones de libertad, la SCP 0032/2012 de 16 de


marzo, ha modulado el entendimiento de la SC 0756/2011 de 20 de mayo de la siguiente
manera: “III.1.4 Modulación a la SC 0756/2011-R de 20 de mayo. En ese contexto,
expresamente la norma fundamental otorga competencia a los jueces en materia penal, para el
conocimiento y sustanciación de la acción de libertad, por cuanto ningún otro juez o tribunal
está habilitada para ejercer dicha competencia , ni siquiera en suplencia legal, toda vez que si
acaso no existiera juez o Sala Penal en el mismo Distrito Judicial que asuma competencia, la
acción de libertad deberá ser resuelta necesariamente por cualquier otro Juez en materia penal
, es decir por Jueces y tribunales de Sentencia en Capitales de departamento y jueces de
Instrucción o Mixtos en Provincias , exceptuando los Jueces de Ejecución Penal debido a la
atribuciones y competencias específicas asumidas por Ley”. De lo precedentemente expuesto se
advierte que los jueces en materia penal son los únicos competentes para conocer las acciones de
libertad en las Capitales de departamento y en las provincias los jueces de instrucción o los
juzgados mixtos, de lo anotado se tiene que el Juzgado Primero de Partido Mixto, Niño, Niña y
Adolescente de Guayaramerín al ser un Juzgado Mixto es competente para conocer la presente
acción de libertad.

III.5. Del tiempo de duración de las medidas cautelares aplicadas en menores

El art. 232 del CNNA, establece: "Se considerarán medidas cautelares: 1. Órdenes de
orientación y supervisión en los términos previstos por éste Código; 2. Citación bajo
apercibimiento de ley; y, 3. Detención preventiva", por su parte el art. 233 del CNNA, señala
que la detención preventiva constituye una regla extraordinaria “…que puede ser determinada
por el Juez de la Niñez y Adolescencia como medida cautelar, a partir del momento en que
recibe la acusación y cuando se presenten cualesquiera de las siguientes circunstancias: 1. Que el
delito tenga prevista pena privativa de libertad, cuyo máximo legal sea de cinco años o más; 2.
Exista el riesgo razonable de que el adolescente evada la acción de la justicia; 3. Exista peligro
de destrucción u obstaculización de la prueba; y, 4. Exista peligro para terceros, en ningún caso
se podrá imponer esta medida por un tiempo mayor a los cuarenta y cinco días, en todo caso el
Juez deberá analizar la posibilidad de remplazar la detención preventiva por otra medida más
favorable al inculpado…”.

III.6. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el caso concreto, el accionante fue objeto de detención por el supuesto delito de violación de
una niña, sancionado por el art. 308 Bis con relación al 310.2 y 3 del CP, supuestamente
cometido contra su hermana menor de 10 años, habiéndose impuesto la medida cautelar de
detención preventiva. Ante tales hechos, el ahora accionante en apoyo del art. 233 del CNNA
última parte, solicitó la cesación a su detención preventiva, pidiendo se le imponga detención
domiciliaria; solicitud que fue denegada por la autoridad demandada, con el argumento, que el
accionante no justificó el tiempo de su detención preventiva, así como tampoco acreditó un
domicilio donde pueda cumplir la detención domiciliaria solicitada.

En primer término, debemos partir indicando que, el art. 60 de la CPE ha establecido que “es
deber del Estado, la sociedad y la familia garantizar la prioridad del interés superior de la niña
niño y adolescente, que comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir
protección y socorro en cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios
públicos y privados; y el acceso a una administración de justicia pronta , oportuna y con
asistencia de personal especializado”.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 953
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Del texto citado, se entiende que el Estado, la sociedad y la familia, son los que protegen en
cualquier circunstancia los derechos de la niña y niño; pero también hace énfasis en que debe
recibir protección y socorro de parte de los mismos; en este entendido, se debe deducir que
cuando se trata de una menor que ha sufrido un ataque de otro menor, esta (menor victima) debe
recibir un trato preferente al del otro, toda vez que se debe velar primero por la integridad de la
menor victima que habría sufrido una violación por parte de su hermano que también viene a ser
un menor; sin embargo, esto no ha sido entendido así por su madre, toda vez que con el fin de
coadyuvar con el menor infractor, dado que se ha enviado a la menor victima a otro domicilio en
otra ciudad y al cuidado de otro hogar, sin considerar que la menor por ser víctima requiere el
cuidado y la protección de su familia tal cual establece el art. 60 de la CPE, por lo que se ha
agravado la situación de la menor victima al separarla del seno familiar.

Por otro lado, con relación al menor infractor, se observa lo siguiente: si bien hubo advertido la
autoridad demandada, que la parte ahora accionante, no acreditó con prueba el tiempo de su
detención preventiva; sin embargo, la autoridad jurisdiccional en su labor de controlador de
garantías constitucionales, podía haber efectuado una valoración de la prueba cursante en
obrados; es decir, establecer el tiempo de detención preventiva del menor infractor, a partir de la
compulsa de la fecha del mandamiento de detención preventiva que cursa en obrados con
relación a la fecha de la celebración de la audiencia de cesación a la detención preventiva y,
observar si evidentemente el menor infractor se encontraba detenido preventivamente por más
de 45 días y así establecer si su petitorio se encontraba dentro lo previsto por el art. 233 del
CNNA.

Con relación al domicilio, de conformidad con la previsión del art. 233 del CNNA, se puede
establecer que, si bien el accionante no acreditó domicilio para el cumplimiento de la detención
domiciliaria, esta autoridad pudo haber dispuesto que el accionante, señale otro domicilio
distinto al de la víctima de alguna otra persona que se haga responsable del menor infractor, toda
vez que no se puede concebir que la víctima menor de edad y el menor infractor, permanezcan
bajo el mismo techo, debiéndose al respecto proteger a la víctima de posibles reincidencias,
además el deber de precautelar su integridad física y psicológica, o en su defecto, tomar otra
medida distinta que asegure la presencia del menor infractor a los actos procesales, pero
logrando un equilibrio entre los derechos y protección tanto de la víctima cuanto del imputado.

De lo anotado, se concluye que la autoridad demandada, no observó correctamente lo


establecido por el art. 233 del CNNA., incumpliendo de esta manera su deber de observancia de
la norma citada ya que no consideró que los menores se encuentran en un ámbito especial de
protección.

Por los fundamentos expuestos, el Juez de garantías al denegar la acción de libertad, no obró en
forma correcta.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve: REVOCAR la Resolución 02/2012 de
14 de febrero, cursante de fs. 101 a 103 vta., pronunciado por el Juez Primero de Partido Mixto,
Niño, Niña y Adolescente de la localidad de Guayaramerín del departamento de Beni y, en
consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, debiendo el Juez demandado disponer una
medida sustitutiva a la privación de libertad, consultando el interés de los menores.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 954


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0119/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00462-2012-01 AL
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 003/2012 de 15 de marzo, pronunciada dentro de la acción de


libertad interpuesta por Hitler Egidio Escalante Medrano contra Ricardo Maldonado
Aliaga, Juez Quinto de Instrucción Penal del departamento de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 14 de marzo de 2012, cursante a fs. 2 y vta., el accionante señala:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

En mérito a la Resolución emitida por el “Fiscal” asignado al caso, fue detenido el “11 de 2012”,
siendo remitido “con la correspondiente imputación formal ante en juez cautelar quinto” (sic).
Agrega que en audiencia de medidas cautelares, pese a que se presentó la víctima y aclaró que
“se le robó nada” (sic) y sólo era una confusión, el Juez ahora demandado, dispuso su detención,
por lo que solicitó se le aplique medidas sustitutivas en esa oportunidad.

De manera contradictoria, posteriormente, el accionante manifiesta que se encuentra detenido


ilegalmente “sin ser remitidos ante autoridad jurisdiccional competente a efectos de establecer
nuestra situación procesal” (sic), vulnerando los arts. 180 de la Constitución Política del Estado
(CPE) y 226 del Código de Procedimiento Penal (CPP).

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante denuncia la vulneración de su derecho a la libertad, sin citar norma Constitucional


que la contenga.

I.1.3. Petitorio

No especifica de manera clara su petitorio; sin embargo se colige que pretende, ser remitido ante
autoridad competente a efecto de que atienda su pedido respecto a la aplicación de medidas
cautelares o se disponga su libertad.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 955


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías

Efectuada la audiencia pública el 15 de marzo de 2012, según consta de fs. 9 a 10, se produjeron
los siguientes hechos:

I.2.1. Ampliación y ratificación de la acción

El abogado del accionante, ratificó in extenso el contenido de su demanda y ampliando la


misma, manifestó que, si bien inicialmente la concubina de su defendido sentó denuncia contra
éste por la supuesta sustracción de la suma del Bs100.- (cien bolivianos) y un teléfono celular;
posteriormente, retiró la denuncia, por tal motivo el ilícito por el cual se le acusaba, había
desaparecido; en consecuencia, no correspondía que el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal,
impusiera medida de detención preventiva, máxime si su representado no es reincidente y
tampoco tiene ninguna sentencia ejecutoriada en su contra.

I.2.2. Informe de la autoridad demanda

Ricardo Maldonado Aliaga, Juez Quinto de Instrucción en lo Penal del departamento de La Paz,
a través del informe escrito, de 15 de marzo de 2012, cursante de fs. 7 a 8, señaló: a) Dentro del
proceso penal seguido contra Hitler Egidio Escalante Medrano, por la supuesta comisión del
delito de robo, el Fiscal de Materia, Víctor Caba Tapia, presentó imputación formal el 12 del
mismo mes y año, solicitando la detención preventiva del encausado por concurrir los
presupuestos contenidos en el art. 233 del CPP; b) En audiencia de medidas cautelares, mediante
Resolución 173/2012 de 13 de marzo, debidamente fundamentada, en aplicación de los arts. 235
ter del CPP modificado por Ley 007 de 18 de mayo de 2010 y 115 del referido Código, el
demandado en calidad de Juez de la causa, dispuso la detención preventiva del procesado, por
considerar, que los peligros alegados por el Ministerio Público se encontraban acreditados;
notificándose en el mismo acto a todas las partes; c) No se vulneraron los derechos o garantías
del ahora accionante, que se acusan como lesionados; y, d) El accionante, no activó el recurso de
apelación contra la Resolución que le impuso las medidas cautelares; en consecuencia, conforme
determina la jurisprudencia constitucional, “no puede aplicarse la excepción a la subsidiariedad
de la acción de libertad” (sic).

I.2.3. Resolución

La Jueza Segunda de Sentencia del departamento de La Paz, constituida en Jueza de garantías,


pronunció la Resolución 003/2012 de 15 de marzo, cursante de fs. 11 a 12, por la cual denegó la
tutela solicitada, argumentando que existen medios ordinarios para resolver la situación del
imputado, por lo que en mérito al principio de subsidiariedad de la acción de libertad, la
concesión de la tutela “no se hace viable” (sic).

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. El 11 de marzo de 2012, el ahora accionante, fue detenido en mérito a una Resolución
emitida por el “Fiscal asignado al caso” (sic) (fs. 2 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 956


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. El 12 de marzo de 2012, el Fiscal de Materia, Víctor Caba Tapia, presentó imputación
formal contra Hitler Egidio Escalante Medrano, por la supuesta comisión del delito de robo,
solicitando se imponga la medida cautelar de detención preventiva por concurrir los elementos
descritos en el art. 233 del CPP (fs. 7).

II.3. Mediante Resolución 173/2012, el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, en audiencia de


medidas cautelares, dispuso la detención preventiva del imputado, por concurrir elementos de
convicción que fundamentan la existencia de riesgo de fuga y obstaculización (fs. 7 y 8).

II.4. Por memorial presentado el 14 de marzo de 2012, Hitler Egidio Escalante Medrano,
interpuso acción de libertad, alegando encontrarse ilegalmente detenido, al no “ser remitidos
ante autoridad jurisdiccional competente a efectos de establecer nuestra situación procesal” (sic)
(fs. 2 )

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

Mediante la presente acción tutelar, el accionante denuncia la vulneración de su derecho a la


libertad, a raíz de que el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, ahora demandado, en audiencia
de medidas cautelares, ordenó su detención preventiva, y “no remitió antecedentes ante la
autoridad competente a fin de que se establezca su situación jurídica”. En consecuencia, en
revisión de la Resolución dictada por el Juez de garantías, corresponde dilucidar si tales
extremos son evidentes y si constituyen persecución, aprehensión, procesamiento o
apresamiento indebidos o ilegales, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad

Previo a ingresar al análisis del caso concreto, es necesario introducir el tema referido a la
naturaleza jurídica de la acción de libertad, puesto que de dicha esencia se podrá determinar la
viabilidad o no de la presente acción.

Mediante la SCP 0037/2012 de 26 de marzo, este Tribunal sostuvo que: “La acción de libertad
conocida en el derecho comparado y en nuestra legislación abrogada como 'recurso de habeas
corpus', encuentra fundamento en innumerables instrumentos normativos de orden
internacional como en la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre,
Declaración Universal de Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, disposiciones normativas que forman parte del bloque de constitucionalidad, de
conformidad a lo dispuesto por el art. 410 de la CPE. Se trata de un mecanismo de defensa
constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la
protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la libertad física como de
locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o
indebidos por parte de servidores públicos o de personas particulares; así como a la vida,
cuando esté en peligro.

Esta garantía de carácter procesal constitucional se encuentra consagrada en el art. 125 de la


CPE, donde dispone que: 'Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera
a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y, solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad'. Norma
constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 957
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

(LTCP), la cual establece que su objeto es la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la libertad de locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de esos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de
restricción o supresión.

En tal sentido, debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está
diseñada sobre la base de dos pilares esenciales, el primero referente a su naturaleza procesal y
el segundo, compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que
configura el contenido esencial de esta garantía, es decir, su naturaleza procesal, se establece
que se encuentra revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada
por sus características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e
inmediación; procede contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no
reconoce fueros ni privilegios. Postulados que pueden ser inferidos de la norma constitucional
antes referida.

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se encuentra
configurada por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE, se
resumen en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la
libertad física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya
procesamiento indebido; y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida”.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

En función a la naturaleza jurídica de esta acción tutelar y su alcance, glosados en el Fundamento


Jurídico precedente, a partir de la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, se establecieron los supuestos
de subsidiariedad excepcional de la acción de libertad, entendimiento fue modulado a partir de la
SC 0008/2010-R de 6 de abril, que en lo pertinente señaló: “I. (…), en caso de existir mecanismos
procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el
derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados
previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad operará
solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado
estas vías específicas”; en consecuencia, toda persona sometida a proceso que considere que en la
sustanciación del mismo las autoridades encargadas incurren en actos que ocasionan lesión a sus
derechos y garantías constitucionales o cuando se ha omitido aplicar la norma o se la ha aplicado
incorrectamente, se encuentra plenamente facultada para activar los mecanismos intraprocesales
que el ordenamiento jurídico prevé como medio idóneo para la protección de sus bienes jurídicos,
y si, aún después de haber agotado los medios en la vía ordinaria, el actor considera que su
pretensión no ha sido debidamente atendida y su derecho restituido, recién se abre la competencia
de la jurisdicción constitucional.

Por otra parte, la SC 0080/2010-R de 3 de mayo, determinó cuándo no es posible ingresar al


análisis de fondo de la problemática planteada, al señalar:

“Situaciones excepcionales en las que a través de la acción de libertad, no es posible ingresar


al análisis de fondo de la problemática denunciada

Bajo la premisa expuesta, los medios de defensa, y en este caso la acción de libertad, no puede
ser desnaturalizada en su esencia y finalidad, debiendo evitarse que se convierta en un medio
alternativo o paralelo que provoque confrontación jurídica con la jurisdicción ordinaria; por
ello, y sin que implique una restricción a sus alcances, ni desconocimiento al principio de
favorabilidad, sino para que no pierda su esencia misma de ser un recurso heroico, se ha
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 958
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecido que en los casos, que en materia penal se impugnen actuaciones no judiciales -antes
de la imputación formal- y judiciales -posteriores a la imputación-, a través de la acción de
libertad, hay aspectos que se deben tener en cuenta, en los cuales de manera excepcional, no es
posible ingresar al fondo de la acción de libertad, a objeto de guardar el equilibrio y
complementariedad entre ambas jurisdicciones, en los siguientes supuestos:
(…)

Segundo Supuesto:

Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una resolución judicial de
medida cautelar que; por ende, afecta al derecho a la libertad física o de locomoción, con
carácter previo a interponer la acción de libertad, se debe apelar la misma, para que el
superior en grado tenga la posibilidad de corregir la arbitrariedad denunciada. Puesto que el
orden legal penal ha previsto ese medio impugnativo, precisamente para que a través de un
recurso rápido, idóneo, efectivo y con la mayor celeridad se repare en el mismo órgano judicial,
las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen cometido en dicha fase o etapa procesal” (las
negrillas son añadidas).

III.3. Análisis del caso concreto

Analizada como ha sido la documental aparejada al expediente, se infiere de la demanda de


acción de libertad, del informe presentado por la autoridad demandada y del acta de audiencia de
acción de libertad sustanciada ante la Jueza de garantías, cuya Resolución hoy se revisa, que el
accionante fue detenido el 11 de marzo de 2012, en cumplimiento a una Resolución emanada del
Fiscal de Materia asignado al caso, servidor público que el 12 de igual mes y año, presentó
imputación formal ante el Juzgado Quinto de Instrucción en lo Penal contra el accionante por la
supuesta comisión del delito de robo, solicitando se imponga medida cautelar de detención
preventiva por concurrir los presupuestos descritos en el art. 233 del CPP, habiendo el Juez de la
causa, en audiencia de medidas cautelares, el 13 del indicado mes y año, mediante Resolución
173/2012, dispuesto la detención preventiva del hoy accionante en el penal de “San Pedro”, por
considerar que existían elementos que generaban convicción suficiente respecto a los riesgos de
fuga y obstaculización.

Dicha Resolución, que impuso al imputado la medida cautelar de detención preventiva, era
susceptible de impugnación a través del recurso de apelación, conforme se señaló en el
Fundamento Jurídico III.2, recurso idóneo, inmediato y eficaz, de conformidad a lo prescrito por
el art. 251 en concordancia con el art. 403 inc. 3) del CPP, normativa que determina que, las
resoluciones que dispongan modifiquen o rechacen las medidas cautelares, son apelables; es
decir, son susceptibles de revisión por parte de un tribunal o autoridad superior en grado que
efectúe un análisis respecto a la razonabilidad de los términos expuestos en la resolución
cuestionada con referencia a los hechos, pruebas y circunstancias del proceso con la finalidad de
precautelar o en su caso reparar las lesiones a derechos y garantías que pudieran haberse
ocasionado por el a quo al disponer la imposición de una determinada medida cautelar.

Por otra parte, respecto a la aseveración del accionante, en sentido de que el ahora demandado,
debió remitir antecedentes ante la “autoridad jurisdiccional competente a efectos de establecer
nuestra situación procesal” (sic); omite considerar que, de acuerdo a lo dispuesto por el art. 54
del CPP, los jueces de instrucción en materia penal, son competentes para ejercer el control
jurisdiccional y la dirección funcional del proceso, así como para emitir las resoluciones que
correspondan durante la etapa preparatoria, competencia que se abre, con el aviso de inicio de
investigaciones, imputación formal y/o solicitud de señalamiento de medidas cautelares; en
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 959
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

consecuencia, el Juez ahora demandado, al momento de disponer la medida cautelar de


detención preventiva contra Hitler Egidio Escalante Medrano, se constituía en la autoridad
jurisdiccional imbuida con plena competencia para conocer y resolver su situación jurídica,
contra cuya determinación procede el recurso de apelación conforme se ha establecido.

En este estado de cosas, se tiene finalmente que, mediante imputación formal presentada por el
Fiscal de Materia, Víctor Caba Tapia, formulada contra Hitler Egidio Escalante Medrano, se
abrió la competencia del Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, para ejercer las funciones de
control jurisdiccional del proceso, autoridad que en pleno ejercicio de dicha competencia, en
audiencia de medidas cautelares, dispuso mediante Resolución 173/2012 de 13 de marzo, la
imposición de la detención preventiva del encausado, decisión que, habiendo sido notificada a
las partes, no mereció impugnación alguna por parte de quien ahora pretende activar la tutela
que brinda la acción de libertad para suplir su negligencia en causa propia; es decir, si el ahora
accionante consideró que la sanción impuesta resultaba lesiva a sus derechos y garantías, pudo,
en la misma audiencia o en el plazo de setenta y dos horas, de conocida la decisión del Juez de la
causa, conforme dispone la norma contenida en el art. 251 del CPP, tantas veces nombrado,
interponer recurso de apelación, impugnando la medida cautelar aplicada en su contra; sin
embargo, haciendo abstracción de los mecanismos intraprocesales establecidos en la normativa
procedimental penal, sin agotar los medios de defensa otorgados por el ordenamiento jurídico,
activó directamente la acción de libertad, acto que, impide a este Tribunal, en atención al
principio de subsidiariedad desarrollado ampliamente en el Fundamento Jurídico III.2, ingresar
al análisis de fondo de la problemática planteada.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la tutela, ha evaluado en forma correcta


los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve: APROBAR, la Resolución
003/2012 de 15 de marzo, cursante de fs. 11 a 12, dictada por la Jueza Segunda de Sentencia del
departamento de La Paz; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada con la aclaración
que no se ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0120/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00154-2012-01-AAC
Departamento: La Paz
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 960
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución 03/2012 de 16 de febrero, cursante de fs. 358 a 359 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Daniel Marcial Echeverría
Hurtado, contra Modesto Palacios Cruz, Julio César Reinaga Rojas, María Elena Escobar
Mejía, Rosario Irene Chávez Alurralde, Rommel Cesar Raña Pommier y José Heberth
Peña Fuentes, Presidente y Vocales -respectivamente- del Tribunal Disciplinario Superior;
Jaime Paz Morales Poveda, Director Nacional de Personal a.i.; Marco Antonio
Calvimontes Forest, Jefe del Departamento Nacional de Movimiento de Personal; y Tomas
Huanca Luque, Asesor Legal de la Dirección General, todos del Comando General de la
Policía Boliviana.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 7 de febrero de 2012, cursante de fs. 104 a 110 vta., el accionante
expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A partir de 2010, fue destinado al Comando Departamental de la Policía de Santa Cruz,


cumpliendo funciones en el Batallón de Seguridad Física Privada, donde se encontraba solo. A
mediados de mayo de igual año, por problemas familiares viajó a la ciudad de La Paz,
solicitando permiso a sus superiores de forma “oral”, quienes no entendieron ni le otorgaron el
mismo; y, al agravarse sus problemas, para precautelar la salud de su hija enferma, se vio
obligado a dejar sus funciones; razón por la cual la Dirección Departamental de Responsabilidad
Profesional de Santa Cruz, dependiente de la Policía Nacional, abrió investigación disciplinaria
en su contra por la supuesta falta de deserción, tipificada en el art. 6 inc. “D” numeral 25 del
Rdspn, instancia que nunca le notificó ni convocó a prestar su declaración informativa, pese a
ello, fue acusado por el Fiscal Policial ante el Tribunal Disciplinario Departamental, quien
requirió inicio de investigación el 2 de julio de 2010, que no se le notificó en el tiempo
establecido en el art. 84 del Rdspn, ni mediante cedulón fijado en su unidad o en su domicilio,
diligencia que se encuentra únicamente en su kárdex personal, contraviniendo lo estipulado en el
art. 85 del referido Reglamento.

El Tribunal Disciplinario Departamental de Santa Cruz, emitió la Resolución 011/2011 de 11 de


febrero, dentro del proceso disciplinario seguido en su contra, mismo que fue sustanciado en su
ausencia y sin la declaratoria en rebeldía, siendo sancionado con la baja definitiva de la Policía
Boliviana, por haber incurrido en deserción y, remitida en grado de revisión al Tribunal
Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, esta instancia pronunció la Resolución 640/2011
de 28 de julio, confirmando la baja definitiva sin la debida fundamentación, al limitarse a
transcribir la relación de los hechos del proceso, incumpliendo lo previsto en los arts. 50 y 126
del Rdspn.

Afirma que la Dirección Departamental de Responsabilidad Profesional, nunca le notificó


mediante edictos publicados en un diario de circulación nacional por dos veces con intervalo de
tres días, como señala el art. 89 del Rdspn. De igual manera procedió el Tribunal Disciplinario
Departamental, respecto a la Resolución definitiva 011/2011 de 11 de febrero, que al no tener
conocimiento de ésta, generó su indefensión, pues no pudo ejercitar su derecho a la apelación
conforme establece el art. 126 del indicado Reglamento. Asimismo, el Tribunal Disciplinario
Superior aprobó actuaciones procesales que tienen vicios de nulidad, contraviniendo lo
establecido en los arts. 52.1.3 y 9, 84, 85, y 88 del Rdspn, obviando que debía subsanarlos, por
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 961
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ser la última instancia legal para velar por la correcta aplicación del indicado Reglamento; así
también, este Tribunal, al emitir la Resolución 640/2011 únicamente enunció los hechos sin la
fundamentación legal respectiva; mientras que el defensor de oficio que le fue designado, sólo se
limitó a presentarse a la audiencia, mas, no ejerció su defensa, avalando las irregularidades
cometidas.

Finalmente, señala que el Director Nacional de Personal a.i. del Comando General de la Policía
Boliviana emitió la Resolución Administrativa (RA) 0136/11 de 28 de diciembre de 2011, que
dispuso su baja definitiva de la Institución, sin derecho a reincorporación; lo que contraviene el
art. 21 del Rdspn, concordante con el art. 12 de la Ley Orgánica de la Policía Nacional (LOPN),
que disponen: “el Comandante General de la Policía Nacional, en ejecución de la Resolución
expresa del Tribunal Disciplinario Superior, dispondrá la baja de la institución sin derecho a
reincorporación”; competencia que fue arbitrariamente asumida por el Director Nacional a.i. así
como por el Jefe del Departamento Nacional de Movimiento de Personal y el Asesor Legal de la
Dirección Nacional.

I.1.2. Derechos y principio supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerados sus derechos al debido proceso, a la “seguridad jurídica” y a la


defensa; como también el principio de legalidad, citando al efecto los arts. “9.4”, 115.I y II,
117.I, 119.I y II, 120.I y “178” de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes, solicita se dejen sin efecto: 1) Las Resoluciones Administrativas
640/2011 pronunciada por el Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana y
“0136/2011” emitida por el Director Nacional de Personal del Comando General de la misma
Institución y; 2) Se disponga su reincorporación a la Policía Boliviana, con rehabilitación de
todos sus derechos institucionales y laborales y el pago de sus haberes devengados y retenidos
ilegalmente.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Realizada la audiencia pública el 16 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
350 a 357 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado del accionante, en audiencia ratificó el tenor íntegro de la acción de amparo


constitucional y además señaló: a) El 14 de enero de 2009, su defendido solicitó al Comando
Departamental de Santa Cruz, el cambio de destino y repliegue a la ciudad de La Paz por
razones familiares; b) El auto inicial del proceso, requerimiento de inicio de investigación y
acusatorio, no fueron notificados al accionante conforme establecen los arts. 84, 85 y 89 del
Rdspn; y, c) De manera ilegal el Director Nacional de Personal del Comando General y el Jefe
Departamental de Movimiento de Personal, así como el Asesor Legal de la Dirección Nacional,
dictaron la RA 0136/11, por la que dieron de baja al accionante, no obstante que esta es una
atribución del Comandante General de la Policía Boliviana, conforme a lo previsto por los arts.
21 del Rdspn y 12 de la LOPN.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 962


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Los miembros del Tribunal Disciplinario Superior, en el informe cursante de fs. 346 a 348,
afirmaron lo siguiente: i) La Dirección Departamental de Responsabilidad Profesional, inició
investigación disciplinaria al accionante por la falta injustificada a sus funciones en el Batallón
de Seguridad Física Privada de Santa Cruz; por lo que, el Fiscal Policial le acusó por infringir el
art. 6 inc. “D” numeral 25 del Rdspn; ii) Remitidos los obrados el Tribunal Disciplinario
Departamental, se emitió el Auto inicial del proceso contra el accionante. Desarrollado el
proceso oral, público continuo y contradictorio, el referido Tribunal emitió la Resolución
011/2011, por la que le sancionó con la baja definitiva de la Institución Policial sin derecho a
reincorporación, conforme dispone el art. 20 inc. d) del indicado Reglamento; iii) El Tribunal
Disciplinario Departamental remitió el caso a conocimiento del Tribunal Disciplinario Superior
de la Policía Boliviana, que previamente puso a conocimiento del Fiscal General, quién verificó
la legalidad del proceso, requiriendo se apruebe la Resolución 011/2011, emitida por el a quo;
iv) El Tribunal Disciplinario Superior, conforme al indicado requerimiento emitió la Resolución
640/2011, aprobando la Resolución del Tribunal inferior; y, v) En la tramitación del proceso
disciplinario, se dio estricto cumplimiento a lo establecido en el Reglamento de Disciplina y
Sanciones de la Policía Nacional, respecto a la legal notificación al accionante, citación
mediante edictos y a la normativa vigente, se le declaró rebelde y contumaz, designándosele un
abogado de oficio.

I.2.3. Resolución

La Sala Social y Administrativa Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,


constituida en Tribunal de garantías, por Resolución 03/2012 de 16 de febrero, cursante de fs.
358 a 359 vta., concedió en parte la acción de amparo constitucional, disponiendo “se notifique
en forma legal” (sic) la Resolución 11/2011 y sin efecto las actuaciones posteriores. Como
fundamentos se señalan los siguientes: 1) El Tribunal Disciplinario Superior de la Policía
Boliviana, notificó al accionante en el tablero de Secretaría del Tribunal con la Resolución
640/2011, por lo que incumplió lo establecido en los arts. 84 y 89 del Rdspn; 2) El Tribunal
Disciplinario de Santa Cruz, emitió la Resolución 011/2011 y pese a la representación del
Oficial de Diligencias en sentido que se desconoce el domicilio y paradero actual del accionante,
no aplicó lo señalado en el art. 89 del referido Reglamento y remitió directamente el expediente
en consulta al Tribunal Disciplinario Superior, el que no observó las señaladas falencias y
mediante Resolución 640/2011, aprobó la Resolución 011/2011; y, 3) El Tribunal Disciplinario
Superior, no observó la falta de notificación con la Resolución pronunciada por el Tribunal
Disciplinario Departamental de Santa Cruz, por lo que debieron ordenar previamente se
regularice esta falencia, evidenciándose que las autoridades accionadas vulneraron la garantía al
debido proceso, infringiendo flagrantemente su propio Reglamento, correspondiendo otorgar la
tutela solicitada.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se concluye


lo siguiente:

II.1. El 8 de noviembre de 2010, el Tribunal Disciplinario Departamental Permanente de Santa


Cruz, en el caso 241/10, dictó el Auto inicial de proceso oral, público, continuo y contradictorio
contra el accionante, por la comisión de la falta grave establecida en el art. 6 inc. “D” num. 25
del Rdspn (fs. 26 a 27).

II.2. El Oficial de Diligencias del referido Tribunal, en cumplimiento del art. 84 del Rdspn, el 6
de diciembre de 2010, representó que conforme a lo indicado por el encargado de Sección de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 963
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Movimiento de Personal del Batallón de Seguridad Física de la Policía Boliviana de Santa Cruz,
el accionante no se presentó a cumplir sus funciones desde el 18 de mayo de ese año y que se
desconoce su domicilio y paradero actual, por lo que no fue habido para su legal notificación
con el Auto inicial de proceso de 8 de noviembre de igual año (fs. 28).

II.3. Por decreto de 15 de diciembre de 2010, la Presidenta del Tribunal Disciplinario


Departamental, en mérito a la representación que antecede, dispuso se notifique mediante cédula
fijada en estrados del Tribunal y por edicto policial, conforme a lo establecido en los arts. 85 y
89 del Rdspn, nombrando abogado de oficio al accionante. En cumplimiento del referido
decreto, el Oficial de Diligencias citó y notificó al Fiscal del Tribunal Disciplinario
Departamental el 20 del mismo mes y año y, mediante Cedulón al accionante el “23 de julio de
2010”, el que se fijó en estrados de Secretaría General y en la puerta de indicado Tribunal en
presencia de un testigo (fs. 29 y 30).

II.4. Mediante edicto policial de 7 y 19 de enero de 2011, la Presidenta del Tribunal


Disciplinario Permanente de Santa Cruz, dentro de los procesos disciplinarios policiales
administrativos seguidos contra miembros de la Guarnición Policial, entre ellos el accionante, al
no tener domicilios conocidos e ignorándose su paradero, dispuso su notificación mediante
edicto de ley para la audiencia del proceso oral, público, continuo y contradictorio. Asimismo,
se emplazó a los procesados para que se presenten en oficinas del mencionado Tribunal en el
plazo de diez días, caso contrario serían declarados rebeldes y contumaces a la ley. Cursa
memorándum del Tribunal Disciplinario Departamental de 21 de enero de 2011, de designación
de abogado de oficio del accionante, para la audiencia en el proceso disciplinario seguido en su
contra (fs. 31 a 33).

II.5. El Oficial de Diligencias del Tribunal, el 26 de enero de 2011, notificó y citó a las partes
procesales, así como al abogado de oficio del accionante, con el Auto inicial del proceso de 8 de
noviembre de 2010, para la audiencia de sorteo de vocales, señalada para el día 31 de enero de
igual año (fs. 34).

En la fecha prevista se realizó la audiencia y se informó por secretaría sobre la ausencia en sala
del accionante; luego, la Presidenta del Tribunal instaló la audiencia y en cumplimiento de los
arts. 46, 47 y 48.1 del Rdspn, se procedió al sorteo y designación de vocales de audiencia en el
proceso disciplinario contra el accionante. El 3 de febrero de 2011, el Oficial de Diligencias del
Tribunal notificó a las partes con este actuado y con el señalamiento de audiencia para el 8 del
mismo mes y año (fs. 36).

II.6. Cursa acta de audiencia de 8 de febrero de 2011, de proceso disciplinario oral y público en
el Caso 241/10 seguido contra el accionante, por la comisión de la falta grave prevista en el art.
6 inc. “D” numeral 25 del Rdspn, donde ante su ausencia, el Tribunal Disciplinario
Departamental, por unanimidad, resolvió declararlo rebelde y contumaz a solicitud del Fiscal de
responsabilidad profesional. Se estableció también que el proceso disciplinario debía continuar
en ausencia del accionante, señalándose audiencia para el 11 del mes y año precitados (fs. 38 a
40).

II.7. En la fecha prevista se realizó la audiencia de proceso disciplinario oral, público, continuo
y contradictorio en el caso de autos, en rebeldía del accionante, donde el Tribunal Disciplinario
Departamental Permanente de Santa Cruz, por unanimidad, mediante Resolución 011/2011 de
11 de febrero, resolvió sancionar con baja definitiva de la Policía Boliviana y sin derecho a
reincorporación al accionante, por la comisión de la falta tipificada en el art. 6 inc. “D” numeral

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 964


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

25 del RDSPN, conforme a lo establecido en el art. 20 inc. d) concordante con los arts. 135 y
136 del precitado Reglamento (fs. 42 a 48).

II.8. El Tribunal Disciplinario Superior Liquidador de la Policía Boliviana, mediante Resolución


640/2011 de 28 de julio, resolvió aprobar la Resolución 011/2011, luego de verificar la legalidad
del proceso oral, público, continuo y contradictorio (fs. 56 a 58).

II.9. A través de RA 0136/11 de 28 de diciembre de 2011 (fs. 63 a 64), el Director Nacional de


Personal a.i. del Comando General de la Policía Boliviana, dispuso la baja definitiva del
accionante, sin derecho a reincorporación en cumplimiento de la Resolución 640/2011 conforme
a lo establecido en los arts. 22 y 105 de la LOPN, concordante con el 101 de la Ley del Régimen
Disciplinario de la Policía Boliviana. Por Memorándum de 6 de enero de 2012, la señalada
autoridad comunicó la decisión asumida al procesado (fs. 62 Bis).

II.10. El 30 de agosto de 2011, el accionante solicitó fotocopias legalizadas de todo el


expediente del caso 241/10, haciendo constar que el proceso se encuentra en grado de apelación
(fs. 180).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que las autoridades demandadas, vulneraron sus derechos al debido
proceso, a la “seguridad jurídica” y a la defensa, así como el principio de legalidad, por cuanto
el proceso disciplinario que se le instauró ante el Tribunal Disciplinario Permanente de Santa
Cruz de la Policía Nacional, se llevó adelante sin considerar su falta de notificación personal con
los actuados procesales desde el inicio de la investigación, emitiéndose la Resolución 011/2011
que le impuso la sanción de baja definitiva sin derecho a reincorporación; mientras que el
Tribunal Disciplinario Superior, mediante Resolución 640/2011 sin fundamentación alguna
confirmó la sanción. De otro lado, por RA 0136/11, emitida de manera ilegal por el Director
Nacional Personal a.i. del Comando General de la Policía Boliviana, se dispuso su baja
definitiva de la institución, sin derecho a reincorporación; sin embargo, conforme a los arts. 21
del Rdspn y 12 de la LOPN, es competencia del Comandante General, atribución que fue
asumida arbitrariamente por dicho Director, el Jefe del Departamento Nacional de Movimiento
de Personal y el Asesor Legal codemandados. Consiguientemente, corresponde dilucidar en
revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela.

III.1. Naturaleza jurídica y carácter subsidiario de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, prevista por el art. 128 de la CPE, se instituye dentro del
nuevo orden constitucional, como una acción tutelar de defensa contra actos u omisiones
ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir derechos reconocidos por la misma
Constitución y la ley. Conforme a esta precisión, el contenido del art. 73 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional (LTCP).

La Ley Fundamental, enfatiza que esta acción tutelar puede presentarse por la persona “…que se
crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de
acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías
restringidos, suprimidos o amenazados” (art. 129.I de la CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 965


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Asimismo, en la SC 1712/2011-R de 7 de noviembre, la que a su vez cita a las SSCC


1035/2010-R de 23 de agosto y 1337/2003-R de 15 de septiembre, desarrollando el principio de
subsidiariedad, señaló: “…se extraen las siguientes reglas y sub reglas de improcedencia de
amparo por subsidiariedad cuándo: 1) las autoridades judiciales o administrativas no han
tenido la posibilidad de pronunciarse sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un
medio de defensa ni ha planteado recurso alguno, así: a) cuando en su oportunidad y en plazo
legal no se planteó un recurso o medio de impugnación y b) cuando no se utilizó un medio de
defensa previsto en el ordenamiento jurídico; y 2) las autoridades judiciales o administrativas
pudieron haber tenido o tienen la posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos
y medios de defensa, así: a) cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se
daría en casos de planteamientos extemporáneos o equivocados; y, b) cuando se utilizó un
medio de defensa útil y procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo
no se agotó, estando al momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de
resolución. Ambos casos, se excluyen de la excepción al principio de subsidiaridad, que se da
cuando la restricción o supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados,
ocasionen perjuicio irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional,
procede la tutela demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de
resolución” (las negrillas nos corresponden).

III.2. Delimitación de ámbitos de protección de la acción de amparo constitucional y del


recurso directo de nulidad

La SC 0099/2010-R de 10 de mayo, estableció que: “A partir de la reforma de 1994 a la


Constitución de 1967, se crea en Bolivia la justicia constitucional a la cabeza del Tribunal
Constitucional, como último y máximo garante de la Constitución y de los derechos
fundamentales. En ese contexto y de acuerdo al criterio de interpretación constitucional de
'unidad constitucional', se establece que el control de constitucionalidad al margen de su rostro
preventivo o reparador, tiene tres brazos operativos de control a saber: el primero referente al
control normativo de constitucionalidad; el segundo vinculado al control reforzado de
constitucionalidad, referente a la vigilancia y resguardo de derechos fundamentales y
finalmente, el control competencial de constitucionalidad, a través del cual se protege la
garantía de competencia frente a actos lesivos que puedan afectarla.

En este ámbito de control de constitucionalidad vinculado directamente a la competencia, para


proteger concretamente la garantía inserta en los arts. 31 de la CPE abrg y 122 de la CPE, el
ordenamiento constitucional, de forma coherente y no aislada o paralela a otros mecanismos de
defensa de derechos fundamentales, ha configurado el elemento específico de protección para el
resguardo a los supuestos de hecho insertos en la normativa referida, que es precisamente el
recurso directo de nulidad, desarrollado en los arts. 120.6 de la CPE abrg y 202.12 de la CPE.

(…) entonces, se tiene que para la esfera administrativa; es decir, para actos administrativos
existen dos supuestos claros para la procedencia del recurso directo de nulidad y la protección
por tanto de la competencia: 1) La usurpación de funciones que no estén establecidas por ley; y,
2) El ejercicio de potestad, se entiende administrativa, que no emane de la ley.

En la esfera jurisdiccional, existen también tres supuestos claros que forman el 'núcleo
esencial' de esta garantía, siendo por tanto nulas las decisiones emitidas por autoridades
judiciales en los siguientes supuestos: i) Resoluciones emitidas en ejercicio de jurisdicción o
potestad que no emane de la Ley; ii) Las resoluciones o actos pronunciados por autoridad que
usurpe funciones que no le compete; iii) Resoluciones pronunciadas por autoridad
jurisdiccional que hubiere cesado en sus funciones.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 966
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En mérito a lo señalado, se puede determinar que el antes recurso de amparo constitucional,


ahora acción de amparo, es un mecanismo de protección eficaz y pertinente para el resguardo
del derecho al debido proceso en todos sus elementos incluido el juez natural, pero, solamente
en sus elementos imparcialidad e independencia, en ese sentido, debe precisarse que la
protección del tercer componente del juez natural; el referente a la competencia en cuanto a
los supuestos de hecho antes descritos; es decir, usurpación de funciones que no estén
mencionadas por ley, ejercicio de potestad administrativa que no emane de la ley, resoluciones
judiciales emitidas en ejercicio de jurisdicción que no emane de la ley o pronunciadas por
autoridad jurisdiccional suspendida en el ejercicio de sus funciones o que hubieren cesado en
las mismas; se encuentran resguardados específicamente por el recurso directo de nulidad”
(las negrillas nos corresponden).

III.3. Análisis del caso concreto

De la lectura de la demanda de amparo constitucional, se establece que la presente acción de


tutelar, fue interpuesta por Daniel Marcial Echeverría Hurtado, contra los miembros del Tribunal
Disciplinario Superior; Director Nacional de Personal a.i., Jefe del Departamento Nacional de
Movimiento de Personal, Asesor Legal de la Dirección Nacional de Personal todos del Comando
General de la Policía Boliviana, por haber presuntamente vulnerado sus derechos al debido
proceso y a la defensa y el principio jurídico de la legalidad en la tramitación del proceso
disciplinario en su contra, caso 241/10, por la supuesta comisión de la falta prevista en el art. 6
inc. “D” numeral 25 del RDSPN, por lo que solicitó se deje sin efecto: i) La resolución
640/2011, emitida por el Tribunal Disciplinario Superior; ii) La RA 0136/11 del Comando
General de la Policía Boliviana; y, iii) Su reincorporación a esta Institución con rehabilitación de
todos sus derechos institucionales y laborales, más el pago de sus haberes devengados y
retenidos ilegalmente.

Sobre dicha pretensión, corresponde establecer que una de las sub reglas establecidas en la
jurisprudencia glosada en el Fundamento Jurídico III.1 de la presente Sentencia, es aplicable a la
problemática que se revisa, puesto que el accionante al solicitar fotocopias legalizadas de todo el
expediente en su memorial de 30 de agosto de 2011, demostró que a partir de ese momento
conocía de la existencia del proceso disciplinario en su contra, y bien tuvo la oportunidad de
reclamar todos los supuestos actos ilegales que ahora denuncia al Presidente y Vocales del
Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana, interponiendo un incidente de nulidad
de obrados, para que dicho Tribunal, como última instancia en la vía administrativa, pueda
rectificar, revocar o anular las decisiones lesivas a sus derechos y en su caso, disponer la nulidad
del proceso, dándole así la posibilidad de pronunciarse sobre el asunto y sólo en su defecto,
interponer recién la acción de amparo constitucional; empero, el accionante no procedió de esa
manera, sino que esperó el transcurso de los seis meses para interponer de manera directa la
presente acción, sin formular reclamo alguno ante las autoridades que presuntamente vulneraron
sus derechos, haciendo así abstracción del carácter subsidiario del amparo constitucional,
evitando que previamente las autoridades demandadas tengan la posibilidad de pronunciarse al
respecto y reparar los supuestos derechos que se acusan como vulnerados. En consecuencia, el
Tribunal Disciplinario Superior de la Policía Boliviana no tuvo la posibilidad de subsanar los
supuestos vicios procedimentales en la vía administrativa disciplinaria; aspecto que
determina la aplicación del principio de subsidiariedad en el presente caso y por ende se deba
denegar la tutela solicitada.

De otro lado, respecto a la falta de competencia en la emisión de la Resolución 0136/11, de baja


definitiva, en la que presuntamente habría incurrido el Director Nacional de Personal a.i. del
Comando General de la Policía Boliviana, conjuntamente el Jefe del Departamento Nacional de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 967
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Movimiento de Personal y el asesor legal quienes habrían usurpado funciones del Comandante
General de la Policía Nacional; en mérito a los aspectos fijados en el Fundamento Jurídico III.2
de la presente Sentencia, específicamente en relación a los actos administrativos disciplinarios,
se colige que la acción de amparo constitucional no es la vía idónea para restituir supuestos de
hecho descritos en el art. 122 de la CPE, toda vez que existe un mecanismo específico para su
resguardo cual es el recurso directo de nulidad.

Por lo expuesto precedentemente, no es posible ingresar al análisis de fondo de la problemática


planteada, como tampoco es viable otorgar la tutela solicitada, siendo incorrecta la actuación del
Tribunal de garantías, al haber concedido parcialmente la acción de amparo constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud a la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve: REVOCAR la Resolución 03/2012 de 16 de febrero, cursante de fs. 358 a 359 vta.,
pronunciada por la Sala Social y Administrativa Primera del Tribunal Departamental de Justicia
de La Paz; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se
ingresó al análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLUIRNACIONAL 0121/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00092-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 37/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 97 a 101 vta., pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional interpuesta por Gilka Mayda Guerrero Copa en
representación legal del Servicio Departamental de Salud (SEDES) Chuquisaca contra José
Antonio Revilla Martínez y Delma Miranda Arancibia, Vocales de la Sala Civil Segunda y de
Familia, Niñez y Adolescencia; y, Javier Salinas, Juez Segundo de Partido en lo Civil y
Comercial, todos del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 25 de febrero de 2012, cursante de fs. 49 a 55, la accionante, señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 968
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

A) Antecedentes del caso

En virtud al proceso ordinario sobre mejor derecho propietario seguido por SEDES Chuquisaca
contra Matilde Candelaria Micaela y Ricarda Vera Gonzales, sobre un inmueble de “5 has, sito en av.
Japón, barrio Aranjuez", zona San Cristóbal de la ciudad de Sucre, mediante Resolución 77/2000 de 1
de abril, pronunciada por el Juez Segundo de Partido en lo Civil y Comercial, se declaró probada la
demanda principal e improbada la excepción de falta de acción y derecho, la reconvencional de
acción negatoria y usucapión opuestas por las demandadas, Resolución que se confirmó en todas las
instancias jurisdiccionales.

Por los antecedentes menionados, refiere la accionante que SEDES Chuquisaca tiene reconocido el
mejor derecho propietario sobre el citado bien inmueble, razón por la cual y frente a medidas de
hecho realizadas por la parte contraria, solicita ante el Juez Segundo de Partido en lo Civil y
Comercial, que en ejecución de sentencia ordene el desapoderamiento del inmueble; empero, por
Auto 344/2011 de 9 de noviembre, esta autoridad jurisdiccional desestima el pedido de
desapoderamiento por no estar este aspecto contemplado en la Resolución 77/2000, decisión contra la
cual, interpuso recurso de apelación, el cual es confirmado por el Auto de Vista SC II-449/2011 de 21
de diciembre, fallo suscrito por los Vocales de la Sala Civil Segunda. Contra esta decisión, el SEDES
Chuquisaca, solicitó explicación sobre la complementación y enmienda, pedido que se rechazó.

B) Actos denunciados como lesivos

Denuncia la parte accionante que las autoridades demandadas al pronunciar el Auto 344/2011 y el
Auto de Vista SCII 449/2011 desestimaron sin un fundamento valedero el pedido de
desapoderamiento que la institución accionante solicitó en ejecución de sentencia, decisión que
implica desconocer la eficacia jurídica de los fallos pasados en autoridad de cosa juzgada, siendo que
“si la cosa juzgada ha reconocido el mejor derecho propietario a favor de la Institución accionante con
ello ha reconocido el derecho a usar, gozar y disponer del inmueble de su propiedad…” (sic).

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante, alega la vulneración de los derechos de la entidad a la que representa, al debido


proceso y a la eficacia jurídica de los fallos ejecutoriados, citando al efecto el art. 115.I y II de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela y en consecuencia: a) Se dejen sin efecto, el Auto 344/2011, respecto a la
negativa del pedido de desapoderamiento y el “Auto de Vista SCII-449/2011 de 21 de diciembre”,
emitido en apelación; y, b) Disponga que el Juez de primera instancia, dicte nueva resolución
ordenando el desapoderamiento del inmueble de propiedad del SEDES Chuquisaca.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 10 de febrero de 2012, se produjeron los siguientes hechos:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante se ratificó el tenor íntegro de la demanda.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 969
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

José Antonio Revilla Martínez y Delma Miranda Arancibia, Vocales de la Sala Civil Segunda y de
Familia, Niñez y Adolescencia del Tribunal Departamental, respectivamente, mediante informe
escrito presentado el 9 de febrero de 2012, cursante a fs. 74 y vta., manifestaron que: 1) La entidad
representada por la accionante, dedujo acción de declaratoria de mejor derecho propietario sin
acumular acción de entrega de inmueble para el caso de ser estimada la demanda, cuando solicitó el
desapoderamiento del inmueble ante el Juez de la causa, este lo denegó, determinación que fue
confirmada en apelación; 2) De conformidad a los principios de imperatividad e inmutabilidad,
establecidos en el art. 514 del Código de Procedimiento Civil (CPC), la sentencia debe ser ejecutada
de acuerdo a los términos en ella dispuestos; y, 3) La cosa juzgada en procesos de declaratoria de
mejor derecho propietario, alcanza a establecer a quien corresponde el dominio del inmueble, al ser
este tipo de resoluciones de naturaleza declarativa, no imponen la obligación de entregar el bien,
máxime si no ha mediado acumulación de acción de restitución de la cosa; por lo que, atender la
solicitud de desapoderamiento efectuada por la ahora accionante, se contrapone al art. 514 del CPC;
en consecuencia, no se puede alegar vulneración al debido proceso, al haberse circunscrito todos los
actos ejecutados por los demandados, a la normativa que rige este tipo de procesos.

Por su parte, el Juez Segundo de Partido en lo Civil y Comercial, mediante informe escrito presentado
en audiencia, cursante de fs. 76 a 78, señaló que: i) El Director Departamental del SEDES
Chuquisaca, instauró proceso ordinario de reconocimiento de mejor derecho propietario contra
Matilde Candelaria Micaela y Ricarda Vera Gonzales, el cual fue declarado probado e improbadas la
excepción y reconvencional interpuestas por las demandadas; ii) Dicha Resolución, ante apelación de
la parte perdidosa fue confirmada totalmente mediante Auto de Vista 131/2000 de 23 de agosto,
mismo que habiendo sido recurrido en casación fue declarado infundado por Auto Supremo 240 de 3
de septiembre de 2001; iii) Posteriormente, la accionante, pidió cancelación de inscripciones en el
registro de Derechos Reales (DD.RR.) de Chuquisaca respecto al inmueble objeto de la litis, así como
también el desapoderamiento del bien, habiéndose deferido el petitorio por Auto de 9 de noviembre
de 2011, disponiéndose la cancelación de las partidas de inscripción en DD.RR., sin lugar al
desapoderamiento por no estar este extremo ordenado en la Resolución pronunciada en proceso
ordinario, debido a que el desapoderamiento, no formaba parte de la demanda principal; y que, de
conformidad al art. 514 del CPC, y siendo que la sentencia pone fin al proceso, dicha Resolución no
puede ser modificada ni alterada en su contenido; iv) Ante tal determinación, la parte accionante,
interpuso recurso de apelación, mereciendo Auto de Vista SCII 449/2011 de 21 de diciembre, que
confirmó el Fallo impugnado; sin embargo, la accionante pretende desconocer resoluciones con
autoridad de cosa juzgada; y, v) La acción de amparo constitucional no es sustitutiva de los recursos
ordinarios que franquea la ley.

I.2.3. Intervención de la Procuraduría General del Estado

Por memorial presentado el 10 de febrero de 2010, cursante de fs. 90 a 91 vta., Lucio Valda Martínez,
Director Desconcentrado Departamental de Chuquisaca de la Procuraduría General del Estado,
manifestó que de conformidad a los arts. 4 de la Ley de la Procuraduría General del Estado (LPGE); 2
y 9 del Decreto Supremo (DS) 0788 de 5 de febrero de 2011, la sede principal de la Procuraduría
General del Estado se encuentra en El Alto y que todas las actuaciones y citaciones procesales en las
que deba intervenir el Procurador General del Estado, como máximo representante de la dicha entidad
y a quien se nombró como tercero interesado en la presente acción, deberán efectuarse en aquel
domicilio; en consecuencia, la citación efectuada a su persona no surte efectos jurídicos, motivo por el
cual solicita se rectifique y enmiende tal actuación.

I.2.4. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 970


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Mediante Resolución 37/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 97 a 101 vta., dictada por la Sala Civil
Primera, se denegó la acción de amparo constitucional, argumentando que el desapoderamiento
solicitado por la parte ahora accionante, “no ha sido objeto de consideración ni de la relación
procesal” (sic), por lo que dicha solicitud no puede entenderse como una consecuencia lógica, jurídica
o automática de la decisión emitida por el Juez de primera instancia; más aún cuando existe otra vía
judicial en materia civil para lograr el desapoderamiento, no siendo la vía constitucional alternativa o
sustitutiva a su pretensión, al no haber agotado la subsidiariedad, debe denegarse la tutela demandada.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Por Resolución 77/2000, pronunciada por el Juez Segundo de Partido en lo Civil y Comercial, se
declaró probada la demanda de reconocimiento de mejor derecho propietario interpuesta por el
SEDES Chuquisaca contra Matilde Candelaria Micaela y Ricarda Vera González, respecto a un lote
de terreno de “5 has de extensión, sito en av. Japón, barrio Aranjuez”, zona San Cristóbal de esta
ciudad. Asimismo, en este fallo se declararon improbadas la excepción de falta de acción y derecho y
la demanda reconvencional de acción negatoria y usucapión opuestas por la parte contraria (fs. 2 a 3
vta.).

II.2. Se evidencia también que la Resolución antes referida, fue confirmada por Auto 131 de 23 de
agosto de 2000, dictado por la Sala Civil Primera, (fs. 4 a 5 vta.). Asimismo, se colige que mediante
Auto Supremo 240 de 3 de septiembre de 2001, se declaró infundado el recurso de casación
interpuesto por la parte contraria a la ahora accionante, adquiriendo por tanto firmeza la Resolución
77/2000 (fs. 6 a 8).

II.3. Mediante memorial de 27 de septiembre de 2011, Gilka Guerrero Copa, en representación del
SEDES Chuquisaca, solicitó la cancelación de inscripción de partidas y mandamiento de
desapoderamiento en cuanto al bien objeto de litigio (fs. 11 a 14).

II.4. Se colige que el Oficial de Diligencias del Juzgado Segundo de Partido en lo Civil y Comercial,
mediante informe de 7 de noviembre de 2011, establece de manera expresa que el inmueble objeto
del litigio, estaba habitado por Elizabeth Aníbarro Vera, sus hijas y algunos parientes (fs.19).

II.5. Por Auto 344/2011, pronunciado por el Juez Segundo de Partido en lo Civil y Comercial, se
dispuso la cancelación de las partidas sin lugar al desapoderamiento “al no estar ello ordenado y
menos dispuesto en ninguna parte de la sentencia del 1º de Abril de 2.000” (fs. 21 vta.).

II.6. Mediante Auto de Vista SCII-449/2011 de 21 de diciembre, José Antonio Revilla Martínez y
Delma Miranda Arancibia, en su calidad de Vocales de la Sala Civil Segunda, confirman en su
totalidad el Auto 344/2011 (fs. 33 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

En este estado de cosas, corresponde ahora precisar con claridad el objeto y la causa de la petición de
tutela; en ese orden, se tiene que el objeto de la presente acción de amparo, es la petición de tutela
constitucional para el resguardo de los derechos al debido proceso y a la eficacia jurídica de los fallos
ejecutoriados; asimismo, la causa, es decir los actos denunciados como lesivos a los derechos de la
parte accionante, versan sobre el Auto 344/2011 y el Auto de Vista SCII-449/2011, que de acuerdo a
la accionante, desestimaron sin un fundamento valedero el pedido de desapoderamiento del bien
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 971
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

inmueble objeto de controversia solicitado en ejecución de fallos, decisiones que implicarían


desconocimiento a la eficacia jurídica de los fallos pasados en autoridad de cosa juzgada.

Ahora bien, en mérito al objeto y causa de la presente acción de tutela, con la finalidad de desarrollar
una coherente argumentación jurídico-constitucional, este fallo desarrollará las siguientes
problemáticas: a) La vigencia de los derechos fundamentales en el nuevo modelo de Estado; b) El
desarrollo dogmático del principio de aplicación directa y eficaz de los derechos fundamentales; c) El
principio de razonabilidad y su vinculación con la aplicación directa y eficaz de los derechos
fundamentales; d) El contenido esencial del derecho fundamental de propiedad; c) La justiciabilidad
del derecho de propiedad a la luz del principio de razonabilidad y los alcances de las sentencias
estimatorias en procesos referentes a mejor derecho propietario; y, f) El control de constitucionalidad
a la luz del principio de razonabilidad frente a una ineficaz justiciabilidad del derecho de propiedad.
En consecuencia, en base a los aspectos antes señalados, se analizará si en el presente caso,
corresponde conceder o no de la tutela solicitada.

III.1. La vigencia de derechos fundamentales en el nuevo modelo de Estado y su relevancia en


la aplicación directa y eficaz de los mismos

En principio, no podría desarrollarse una coherente argumentación jurídica sin analizar con carácter
previo y en contextos comparados y por supuesto en el ámbito interno, la evolución del
constitucionalismo, su incidencia en el modelo de Estado imperante y en la eficacia de los derechos
fundamentales.

En efecto, la teoría constitucional, precisa los orígenes del constitucionalismo en el llamado periodo
clásico o demo-liberal, en el cual, como influjo directo de los procesos histórico-políticos inglés,
norteamericano y francés, se diseñaron las bases de un constitucionalismo acorde con un modelo de
Estado Liberal, cuyos postulados tienen la finalidad de poner límites al ejercicio del poder público
como ideal máximo del constitucionalismo propio de este periodo.

En la perspectiva desarrollada, debe además resaltarse que la ingeniería político-jurídica del


constitucionalismo demo-liberal, basó su estructura en tres pilares esenciales: 1) El principio de
generalidad de la ley; 2) El reconocimiento de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley; y, 3) La
consagración de la autonomía de la voluntad privada. En efecto, precisamente a partir de estos
aspectos, los límites al poder, encuentran una herramienta institucional concreta en el principio de
“imperio de la ley”, el cual reforzado por la interpretación exegética como herramienta hermenéutica
por excelencia en esta etapa, refuerza la visión del constitucionalismo y del modelo de estado demo-
liberal, concepción que merced al fenómeno de “transplante jurídico” del modelo francés a contextos
latinoamericanos, fue asumido por estos países con sólidas bases en la familia jurídica romano-
germánica, como es el caso de Bolivia.

Ahora si bien, el constitucionalismo demo-liberal en el devenir de procesos histórico-políticos


evolucionó y amplió sus alcances, aspecto evidente especialmente en el contexto del Estado Social y
Democrático de Derecho, empero, la cultura jurídica basada en el imperio de la ley, neutralizó en gran
medida el “valor normativo de la Constitución” y consolidó la vigencia de un Estado ius-positivista y
formalista, no siempre apto para una eficacia máxima de los derechos fundamentales.

Precisamente, la premisa en virtud de la cual se debe asegurar la eficacia máxima de los derechos
fundamentales, exige en términos de teoría del derecho, la superación de una concepción ius-
positivista y formalista del sistema jurídico, e implica la adopción de postulados jurídicos enmarcados
en cánones constitucionales no solamente destinados a limitar el poder, sino fundamentalmente
direccionados a consagrar y consolidar la vigencia material de los derechos fundamentales.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 972
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Bajo el concepto indicado, el principio de aplicación directa y eficaz de los derechos


fundamentales, constituye un postulado que consolida el valor normativo de la Constitución,
por el cual, los derechos fundamentales tienen una efectividad plena más allá de un reconocimiento
legislativo o de formalismos extremos que puedan obstaculizar su plena vigencia, aspecto que
caracteriza la “última generación del Constitucionalismo”, en el cual, el fenómeno de
constitucionalización del ordenamiento jurídico, se consagra y alcanza su esplendor a través del
principio de aplicación directa de los derechos fundamentales, el cual se materializa a través del
nuevo rol de las autoridades jurisdiccionales en su labor de interpretación constitucional
acompañada de una coherente teoría de argumentación jurídica.

Por los fundamentos expuestos, no puede el presente fallo soslayar los alcances de este principio en el
nuevo orden constitucional y en la estructura del nuevo modelo de Estado, razón por la cual, a
continuación, se desarrollará el mismo desde el mandato constitucional imperante en el Estado
Plurinacional de Bolivia.

III.2. El principio de aplicación directa y eficaz de derechos fundamentales en el orden


constitucional vigente

El régimen constitucional vigente a partir del referendo constitucional de 2009, diseña un nuevo
modelo de Estado, cuyo sustento estructural, encuentra razón de ser en el respeto a los derechos
fundamentales insertos en el bloque de constitucionalidad, reconocido por el art. 410 de la CPE, en
ese contexto, este pilar esencial del Estado Plurinacional de Bolivia encuentra validez material en el
reconocimiento expreso del principio de aplicación directa de derechos fundamentales el cual se
encuentra taxativamente reconocido por el art. 109.I de la CPE, cuyo tenor señala: “Todos los
derechos reconocidos en la Constitución son directamente aplicables y gozan de iguales garantías
para su protección” (resaltado nuestro).

El principio de aplicación directa de la Ley Fundamental, que además por antonomasia comprende a
la aplicación eficaz de derechos, está íntimamente ligado con el valor axiomático de la
Constitución, postulado a partir del cual, el fenómeno de constitucionalización o de irradiación del
contenido de la Constitución en el orden jurídico y social, no se realizará solamente en cuanto a las
normas positivas de rango constitucional, sino también en relación a las directrices axiomáticas
rectoras del orden jurídico e institucional del Estado Plurinacional de Bolivia, como ser los valores
justicia e igualdad, razón por la cual, solamente a partir de esta concepción puede sustentarse la
eficacia del valor normativo de la Constitución.

En el marco de lo señalado, el valor normativo de la Constitución axiomática, como es el caso del


texto aprobado en 2009, asegura la aplicación directa y eficaz de los derechos fundamentales a
través de la labor interpretativa o hermenéutica de las autoridades jurisdiccionales, cuyas
decisiones deben enmarcarse en los valores justicia e igualdad, como postulados esenciales del
principio de razonabilidad de las decisiones, el que a su vez, irradiará el contenido esencial de
los derechos fundamentales y consolidará la vigencia plena del Estado Constitucional de
Derecho.

III.3. El principio de razonabilidad y su vinculación con la aplicación directa y eficaz de los


derechos fundamentales

Como ya se puntualizó, el valor axiomático y dogmático-garantista de la nueva Constitución Política


del Estado está íntimamente ligado al principio de aplicación directa y eficaz de los derechos
fundamentales plasmado en el art. 109.I de la CPE, en ese orden de ideas, debe precisarse que el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 973


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

estándar axiomático, destinado a materializar por parte de las autoridades jurisdiccionales los
valores de igualdad y justicia, es el principio de razonabilidad.

Cabe precisar que los valores de justicia e igualdad constituyen el estándar axiomático y
presupuesto para el ejercicio de los roles jurisdiccionales con la misión específica de asegurar la
eficacia de los derechos fundamentales.

Estos estándares axiomáticos, en el orden constitucional imperante en el Estado Plurinacional de


Bolivia, tienen génesis directa en el valor supremo del Estado, que es el “vivir bien”, valor inserto en
el preámbulo de la Norma Fundamental, a partir del cual deben ser entendidos los valores ético-
morales de la sociedad plural, plasmados en los dos parágrafos del art. 8 de la CPE. En ese orden,
estos parámetros axiomáticos, es decir, el valor justicia e igualdad que son consustanciales al
valor vivir bien, forman parte del contenido esencial de todos los derechos fundamentales, por
lo que las autoridades jurisdiccionales en el ejercicio de sus competencias, deben emitir
decisiones razonables y acordes con estos principios, asegurando así una verdadera y real
materialización del principio de aplicación directa de los derechos fundamentales.

III.4. El contenido esencial del derecho de propiedad a la luz del principio de razonabilidad
como estándar axiomático para su aplicación directa.

La teoría constitucional ha desarrollado la técnica del contenido esencial de los derechos


fundamentales, a partir de la cual, la aplicación directa de los mismos debe asegurar el respeto y
eficacia plena de los elementos constitutivos de ese contenido esencial o núcleo duro de derechos,
para cumplir así con los estándares axiomáticos rectores del principio de razonabilidad.

En el marco de lo señalado, corresponde precisar que el derecho a la propiedad es un derecho


fundamental expresamente reconocido por el bloque de constitucionalidad; así, el art. 56.I de la CPE,
indica que “Toda persona tiene derecho a la propiedad privada individual o colectiva, siempre que
esta cumpla una función social”; asimismo, el art. 17 de la Declaración Universal de Derechos
Humanos (DUDH), en su primer parágrafo indica: “Toda persona tiene derecho a la propiedad
individual o colectiva”; de la misma forma, el segundo parágrafo de esta disposición, puntualiza:
“…nadie será privado arbitrariamente de su propiedad”; también, la Convención Americana de
Derechos Humanos, en su art. 21 consagra el derecho a la propiedad privada, disponiendo en su
primer parágrafo lo siguiente: “Toda persona tiene derecho al uso y goce de sus bienes…”. Además,
el segundo numeral de esta disposición dispone que: “Ninguna persona puede ser privada de sus
bienes, excepto mediante el pago de indemnización justa…”. A partir de estas disposiciones que
forman parte del bloque de constitucionalidad boliviano de acuerdo al art. 410.I de la CPE, para
efectos de una coherente argumentación jurídica, deben mencionarse los elementos constitutivos del
contenido esencial del derecho de propiedad, en ese sentido, este derecho fundamental, cuya génesis
se encuentra no solamente en el texto constitucional sino también en el bloque de convencionalidad,
en su núcleo duro se identifican tres elementos esenciales: i) El derecho de uso; ii) El derecho de
goce; y, iii) El derecho de disfrute. Asimismo, estos tres elementos tienen un sustento axiológico
que refuerza dicho contenido esencial, basado en los valores libertad, igualdad, solidaridad y
justicia. Por su parte, es imperante además precisar que este núcleo esencial del derecho
fundamental de propiedad, genera a su vez obligaciones negativas tanto para el Estado como
para particulares que se traducen en las siguientes: a) Prohibición de privación arbitraria de
propiedad; y, b) Prohibición de limitación arbitraria de propiedad.

A partir de los aspectos precedentemente contemplados, debe indicarse que el principio de


razonabilidad, el cual tal como se dijo, está conformado por los valores o pautas axiomáticas
referentes a la libertad, igualdad, justicia y vivir bien, constituye el estándar axiomático para la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 974
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

directa justiciabilidad del derecho de propiedad, en ese orden, se establece que las decisiones
jurisdiccionales que incurran en privación o limitación arbitraria de la propiedad, implican
una directa afectación al principio de razonabilidad y como consecuencia directa afectan
también el contenido esencial del derecho de propiedad en sus tres elementos esenciales: uso,
goce y disfrute.

III.5. La justiciabilidad del derecho de propiedad a la luz del principio de razonabilidad. Los
alcances de las sentencias estimatorias en procesos referentes a mejor derecho propietario

En todo Estado Constitucional de Derecho, los derechos fundamentales deben tener una garantía
jurisdiccional para su tutela y directa justiciabilidad, en ese orden, el Estado Plurinacional de Bolivia,
sustenta su estructura orgánica en el principio de separación orgánica, a partir del cual, el poder
público se ejerce a través de los órganos ejecutivo, legislativo, judicial y electoral. En ese contexto, el
órgano judicial, merced al principio de unidad jurisdiccional, es el mecanismo orgánico destinado a la
administración de justicia a través de sus jurisdicciones: la jurisdicción ordinaria; la jurisdicción
indígena originaria y campesina; y la jurisdicción agroambiental; así como las jurisdicciones
especializadas.

En resguardo de una coherente técnica de argumentación jurídica, es pertinente indicar que el órgano
judicial en el marco de la justicia ordinaria, es la instancia jurisdiccional a la cual por voluntad
constituyente se le encomienda el conocimiento de controversias vinculadas a derechos propietarios,
así la teleología de los procesos ordinarios conocidos también por la teoría procesal general como
procesos de conocimiento, disciplinan reglas de orden procesal destinadas a garantizar la directa
justiciabilidad del contenido esencial del derecho fundamental de propiedad, consagrando por tanto a
través de este mecanismo institucional, el principio de aplicación directa y efectiva de los derechos
fundamentales. Así, las acciones de mejor derecho propietario -entre otras-, se configuran como
verdaderas garantías jurisdiccionales destinadas a activar el aparato orgánico-jurisdiccional
imperante y lograr por ende la emisión de una decisión jurisdiccional definitiva y de carácter
declaratorio, que en caso de ser estimatoria a los derechos de propiedad invocados por el
justiciable, asegure la eficaz y real aplicación del contenido esencial de este derecho
fundamental.

Respecto a las ideas expuestas, se debe indicar que el principio de razonabilidad debe irradiar de
manera directa, el contenido de sentencias judiciales para evitar así supresiones y limitaciones
arbitrarias al derecho fundamental de propiedad, por lo que la eficacia de los fallos, está
condicionada a una aplicación directa y real del contenido esencial del derecho de propiedad
con sus tres componentes esenciales: uso, goce y disfrute.

Ahora bien, a la luz de los principios de razonabilidad y aplicación directa y efectiva del contenido
esencial del derecho de propiedad, debe señalarse que interpretando los presupuestos procesales
sustanciales del orden adjetivo civil imperante bajo un criterio hermenéutico denominado “de y
conforme a la Constitución”, se tiene que este asegura el cumplimiento de este estándar axiomático
como es el principio de razonabilidad, por tal razón, considerando que el proceso de mejor derecho
propietario, destinado a la consecución de una declaración judicial vinculada al derecho propietario,
genera como efectos de una decisión estimatoria tanto para los jueces como particulares, las
prohibiciones negativas propias de la eficacia del contenido esencial del derecho propietario, es
decir, la prohibición de limitación o supresión arbitraria de este derecho.

Precisamente, en armonía con el postulado antes indicado, el art. 33 de la Ley de Abreviación


Procesal Civil y Asistencia Familiar (LAPCAF), disposición que modifica el art. 520 del CPC, en lo
referente a la forma de ejecutar las sentencias en cuanto a obligaciones de dar, en su tenor literal
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 975
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

menciona en su segundo parágrafo lo siguiente: “Tratándose de obligaciones de dar alguna cosa que
se halle en el patrimonio del deudor, se librará mandamiento para desapoderar de ella al obligado y
entregarla al actor, con el auxilio en su caso de la fuerza pública”.

En efecto, el tenor literal de la citada disposición, se encuentra en armonía con el art. 56 de la CPE y
demás disposiciones del bloque de constitucionalidad que consagran el derecho de propiedad, por
tanto, la facultad de las autoridades jurisdiccionales de ordenar el desapoderamiento en
ejecución de fallos, para el caso de procesos en los cuales exista una sentencia estimatoria que
declare el derecho propietario en relación a la parte actora, responde al principio de aplicación
directa y efectiva del contenido esencial del derecho de propiedad, es decir, a la aplicación
efectiva y real de sus tres elementos el uso, goce y disposición, por tanto, la omisión de ejercicio
de esta atribución frente a un pedido expreso de parte, implica una limitación arbitraria al
derecho de propiedad, aspecto que en esencia afecta de manera directa al principio de
razonabilidad de las decisiones jurisdiccionales.

En el orden de ideas expuesto, es pertinente señalar que en los procesos de conocimiento vinculados
con derechos particulares, como podría ser aquellos referidos a mejor derecho propietario, rige el
principio dispositivo, en virtud del cual, las partes procesales inician y conducen sus pretensiones en
el marco del principio de autonomía de la voluntad, siendo este postulado el límite objetivo para la
actuación del juez, quien no puede apartarse de dichas directrices establecidas en el decurso de la
causa por las partes procesales, en ese orden, en un contexto demo-liberal en el cual se genera el
desarrollo teórico de este principio, por las características del modelo de Estado, expresamente
explicadas en el Fundamento Jurídico

III.1 de la presente Resolución, dicho principio tiene una connotación diferente a la validez de
este postulado en el marco del Estado Constitucional de Derecho, en el cual, la eficacia de los
derechos fundamentales constituye el límite y medida de validez del principio dispositivo, por lo
que los jueces, al ser auténticos garantes de los derechos fundamentales, deben asegurar la
máxima eficacia de los derechos fundamentales contenidos en una sentencia declarativa.

En estricta coherencia a la afirmación realizada, cabe señalar que en las sentencias declarativas de
derechos propietarios, la eficacia del contenido esencial de este derecho, es decir, el uso, goce y
disfrute del bien, en relación del cual se declara judicialmente la titularidad, debe ser resguardada y
garantizada por la autoridad jurisdiccional, entendiendo que el art. 190 del CPC, interpretándolo
armoniosamente con la tutela que se da al derecho de propiedad en el bloque de constitucionalidad,
establece que “La sentencia (…) contendrá decisiones expresas, positivas y precisas; recaerá sobre las
cosas litigiosas, en la manera en que hubieren sido demandadas (…), en ese orden, definitivamente al
ser demandado el mejor derecho propietario y en caso de estimarse dicha pretensión, el
desapoderamiento del bien en litigio, aunque no hubiese sido expresamente pedido en la
demanda, es un aspecto que asegura la aplicación eficaz del contenido esencial del derecho
fundamental de propiedad, por lo que sus alcances inequívocamente recaen sobre la cosa
litigiosa, cumpliendo así con el mandato del art. 190 del CPC, razón por la cual, el ejercicio de
esta facultad, de ninguna manera implica alteración de los efectos de la cosa juzgada de
decisiones jurisdiccionales, por el contrario, asegura la efectividad de fallos judiciales como
presupuesto esencial de la justiciabilidad del derecho fundamental de propiedad en un Estado
Constitucional de Derecho.

III.6. El control de constitucionalidad a la luz del principio de razonabilidad frente a una


ineficaz justiciabilidad del derecho de propiedad

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 976


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La eficacia máxima de derechos fundamentales como presupuesto esencial del Estado Constitucional
de Derecho y por ende del Estado Plurinacional de Bolivia, obliga al último y máximo contralor de
constitucionalidad como es el Tribunal Constitucional Plurinacional, a materializar el fenómeno de
irradiación de esta Constitución axiomática y dogmático-garantísta en todos los actos de la vida social
incluidas las resoluciones judiciales; por tanto, el ejercicio del control de constitucionalidad, podrá
efectuarse a la luz del principio de razonabilidad, como mecanismos efectivo y oportuno para la
vigencia de derechos fundamentales, por esta razón, el orden supremo, contempla en el ámbito de
control tutelar de derechos fundamentales, las acciones de defensa, las cuales constituyen garantías
adjetivas eficaces y oportunas para la defensa de los derechos de las personas.

En el marco de lo señalado, bajo el parámetro del principio de razonabilidad, la acción de amparo


constitucional, está configurada como un verdadero mecanismo idóneo, oportuno y eficaz para la
tutela de derechos fundamentales, cuando su protección no se encuentre dentro del ámbito de
aplicación de otros mecanismos de defensa o cuando pueda ser tutelada por otros mecanismos
idóneos de defensa a los derechos fundamentales.

De acuerdo al postulado precedentemente citado, debe precisarse además que el Estado Plurinacional
de Bolivia, en su diseño y postulados, responde a la ingeniería propia del sistema interamericano de
protección de derechos humanos, cuya construcción dogmática e institucional, fue realizada en el
marco de los alcances y preceptos contenidos en la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, en ese orden, este instrumento supranacional inserto en el bloque de constitucionalidad
boliviano, en su art. 25.1, indica que: “Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a
cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos
que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la presente
Convención…”.

A partir de este mandato, se establece que la acción de amparo constitucional, disciplinada de manera
específica en los arts. 128 y 129 de la CPE, en su diseño constitucional, responde de manera directa al
mandato del art. 25 de la Convención América Derechos Humanos, siendo que su contenido esencial
está estructurado sobre la base de los principios de sumatoriedad e inmediantez, a partir de los cuales
se consagra la vigencia en este nuevo modelo de Estado, de un mecanismo de tutela pronto y
oportuno, para el resguardo de derechos fundamentales frente a actos u omisiones lesivos a estos
provocadas por servidores públicos, incluidos autoridades jurisdiccionales, cuando en sede de la
justicia ordinaria, a pesar de agotarse los mecanismos internos para el cuestionamiento de dichas
decisiones, las lesiones a derechos fundamentales no hubieran sido reparadas.

III.7. Análisis del caso concreto

En este estado de cosas y en el marco del desarrollo argumentativo precedentemente realizado, es


pertinente señalar que en la especie, la parte accionante inició un proceso ordinario de mejor derecho
propietario, en mérito del cual, por Resolución 77/2000, pronunciada por el Juez Segundo de Partido
en lo Civil y Comercial, se declaró probada la demanda, por lo que en cuanto a este aspecto, se colige
que la sentencia emitida es de naturaleza declarativa del derecho de propiedad de la parte accionante.
En ese contexto, se tiene que la parte ahora accionante, en mérito a la sentencia declarativa de un
derecho propietario a su favor, el 27 de septiembre de 2011, solicitó al juez de instancia ahora
demandado, el desapoderamiento del bien cuya titularidad fue declarada a su favor, así lo evidencia la
documental cursante de fs. 11 a 14 de obrados; sin embargo, por Auto, la autoridad de primera
instancia ahora demandada, denegó el desapoderamiento solicitado alegando que este aspecto no fue
ordenado ni dispuesto por la sentencia estimatoria de mejor derecho propietario (fs. 21 vta.). En base
a estos antecedentes, se tiene que a pesar del recurso de apelación interpuesto por la parte ahora
accionante, los Vocales de la Sala Civil Segunda, por Auto de Vista SCII-449/2011, confirman en su
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 977
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

totalidad la decisión de primera instancia (fs. 33 vta.). En este contexto y sobre la base de estos
aspectos, se establece lo siguiente:

i) De acuerdo a lo señalado en el Fundamento Jurídico III.4 de la presente Sentencia, el derecho de


propiedad en su núcleo duro está compuesto por tres elementos esenciales: el derecho de uso, goce y
disfrute, derecho que a su vez encuentra sustento axiológico en los valores libertad, igualdad y
justicia, por cuanto estos aspectos en el ejercicio de los roles jurisdiccionales deben ser asegurados en
su eficacia máxima por las autoridades judiciales; sin embargo, en el caso concreto, las autoridades
demandadas, a través tanto del Auto 344/2011 como del Auto de Vista SCII-449/2011, al rechazar la
solicitud de desapoderamiento y al confirmar esta decisión, desconocieron de manera flagrante el
principio de aplicación directa y eficaz del derecho fundamental de propiedad, evitando la
consagración plena del contenido esencial del derecho de propiedad en sus tres elementos: uso, goce
y disfrute.

ii) Asimismo, en el Fundamento Jurídico III.4, se indicó que los elementos del contenido esencial del
derecho fundamental de propiedad, generan dos prohibiciones específicas: a) La prohibición de
privación arbitraria de propiedad; y, b) La prohibición de limitación arbitraria de propiedad. En base a
estos aspectos, en la especie, se tiene que la negativa por parte de las autoridades jurisdiccionales de
ordenar el desapoderamiento del bien inmueble declarado judicialmente de propiedad de la parte
accionante, implica una flagrante vulneración a la segunda prohibición referida, es decir, constituye
una limitación arbitraria de propiedad, aspecto absolutamente contrario al principio de razonabilidad y
manifiestamente vulneratorio al contenido esencial del derecho de propiedad y por ende a los
postulados del Estado Constitucional de Derecho.

iii) En el Fundamento Jurídico III.5, se señaló también que las acciones de mejor derecho propietario
se configuran como verdaderas garantías jurisdiccionales destinadas a activar el aparato orgánico-
jurisdiccional imperante y lograr por ende la emisión de una decisión jurisdiccional definitiva y de
carácter declaratorio, que en caso de ser estimatoria a los derechos de propiedad invocados por el
justiciable, asegure la eficaz y real aplicación del contenido esencial de este derecho fundamental, en
ese contexto, en la especie, se evidencia que las autoridades demandadas, a través tanto del Auto
344/2011 como del Auto de Vista SCII-449/2011, al rechazar la solicitud de desapoderamiento y al
confirmar esta decisión, desconocen la naturaleza jurídica de las sentencias declarativas de derechos
propietarios y afectan flagrantemente el principio de aplicación eficaz y real de este derecho
fundamental.

iv) Se indicó en el citado Fundamento Jurídico III.5, que la figura jurídica del desapoderamiento
disciplinada en el art. 33 de la LAPCAF, aunque este aspecto no hubiese sido expresamente pedido en
la demanda, es un elemento que asegura la aplicación eficaz del contenido esencial del derecho
fundamental de propiedad, por lo que sus alcances inequívocamente recaen sobre la cosa litigiosa,
cumpliendo así con el mandato del art. 190 del CPC, razón por la cual, el ejercicio de esta facultad, de
ninguna manera implica alteración de los efectos de la cosa juzgada de decisiones jurisdiccionales,
por el contrario, asegura la efectividad de fallos judiciales como presupuesto esencial de la
justiciabilidad del derecho fundamental de propiedad en un Estado Constitucional de Derecho, por
tanto, merced a estos argumentos se evidencia que, en la especie, la denegación al desapoderamiento,
afecta inequívocamente la garantía de efectividad de los fallos judiciales como presupuesto de las
reglas de un debido proceso.

v) Asimismo, tal como se dijo en el Fundamento Jurídico III.2, el estándar axiomático destinado a
materializar por parte de las autoridades jurisdiccionales los valores de igualdad y justicia, está dado
por el principio de razonabilidad, constituyendo estos valores de rango supremo elementos esenciales
de este principio, el cual constituye un presupuesto fundamental para el ejercicio de los roles
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 978
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

jurisdiccionales, con la misión específica de asegurar la eficacia de los derechos fundamentales, en


ese orden, se establece que las autoridades demandadas, a través tanto del Auto 344/2011 como del
Auto de Vista SCII-449/2011, al rechazar la solicitud de desapoderamiento y al confirmar esta
decisión, incumplieron todos los presupuestos del razonamiento jurídico-constitucional antes
expuesto, afectando por tanto la esencia del principio de razonabilidad como estándar axiomático de
validez del Estado Constitucional de Derecho.

vi) También, en el Fundamento Jurídico III.3 de la presente Sentencia, se puntualizó que el valor
justicia e igualdad, como pautas axiomáticas consustanciales al valor vivir bien, forman parte del
contenido esencial de todos los derechos fundamentales, por lo que las autoridades jurisdiccionales en
el ejercicio de sus competencias, deben emitir decisiones razonables y acordes con estos principios,
asegurando así una verdadera y real materialización del principio de aplicación directa de los
derechos fundamentales, sin embargo, en la especie, se evidencia que las autoridades demandadas, a
través tanto del Auto 344/2011 como del Auto de Vista SCII-449/2011, al rechazar la solicitud de
desapoderamiento y al confirmar esta decisión, desconocieron el valor de la Constitución normativa y
axiomática, decisiones que por tanto, constituyen la antítesis a los pilares del Estado Constitucional de
Derecho.

En mérito a todos los fundamentos expuestos en el caso concreto, es evidente que la afectación por
parte de las autoridades demandadas al contenido esencial del derecho de propiedad, al principio de
razonabilidad y al principio de directa y eficaz aplicación de derechos fundamentales, constituye
también una manifiesta vulneración al derecho fundamental al debido proceso, puesto que uno de los
elementos constitutivos de este derecho fundamental, inequívocamente versa sobre la eficacia de las
decisiones judiciales definitivas emitidas en sede jurisdiccional.

En consecuencia, en virtud a los argumentos expuestos, se evidencia que el Tribunal de garantías, al


denegar la acción de amparo constitucional, no ha evaluado en forma correcta los datos del proceso y
las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Tercera, en virtud de la autoridad que le confiere


la Constitución Política del Estado de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional; en revisión, resuelve:

1º REVOCAR la Resolución 37/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 97 a 101 vta., dictada por la
Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca; y en consecuencia,
CONCEDER la tutela solicitada.

2º DISPONER, la nulidad del Auto de Vista SCII-449/2011 emitido por la Sala Civil Primera del
Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, debiendo las autoridades ahora demandados dictar
nueva resolución conforme a los fundamentos de la presente Sentencia Constitucional.

3º Ordenar a Secretaría General del Tribunal Constitucional Plurinacional, la difusión del presente
fallo en todas las Salas de este órgano de control de constitucionalidad y en los distintos Distritos
Judiciales establecidos en el Estado Plurinacional de Bolivia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 979
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0123/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00135-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 3 de febrero de 2012, cursante de fs. 99 a 101 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Blanca María Betzabe Guillen
Tapia, Juan Carlos Orsini Puente y Guilberto Rolando Copaz Pacheco, Miembros de la
comisión liquidadora de la Empresa Cochabambina de Gas Sociedad Anónima Mixta
(EMCOGAS S.A.M.) en Liquidación contra Ruth Claros Salamanca, Gerente Distrital a.i.
de Grandes Contribuyentes (GRACO) Cochabamba del Servicio de Impuestos Nacionales
(SIN).
I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 12 de enero de 2012, cursante de fs. 55 a 58, los accionantes
exponen los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 3 de diciembre de 2008, EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, interpuso demanda contencioso


tributaria contra GRACO Cochabamba del SIN, pidiendo se anule la Resolución Determinativa
35/2008 de 7 de noviembre, por haber sido suscrita por Mario Casón Morales, Gerente Distrital
a.i. de GRACO, sin competencia y usurpando jurisdicción que no lo corresponde; fue admitida
mediante Resolución de 15 de diciembre de 2008, por el Juez de Partido Administrativo,
Coactivo Fiscal y Tributario del entonces Distrito Judicial de Cochabamba y, conforme al art.
231 del Código Tributario de 1992 (CTb.1992), determinó la suspensión de la ejecución del acto
impugnado; es decir, la Resolución Determinativa 35/2008.

Señala que el expediente del proceso contencioso tributario se encuentra en trámite, radicado en
la Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba,
esperando sorteo en virtud a la apelación interpuesta contra el Auto de 4 de enero de 2011; por
ello, se acredita que la Resolución Determinativa 35/2008 al haber sido impugnada en juicio
contencioso tributario, no se encuentra ejecutoriada, por lo que, al haber la administración
tributaria entregado a EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, cédula mediante la cual hace conocer
el “proveído de Inicio de Ejecución Tributaria 24-00495-12” para el cobro de lo dispuesto en la
Resolución Determinativa 35/2008, alegando que se encontraría firme y constituida en título de
ejecución tributaria por la suma líquida y exigible de UFV´s 26 807 856 (veintiséis millones
ochocientos siete mil ochocientos cincuenta y seis Unidades de Fomento a la Vivienda), ha
cometido un acto ilegal, puesto que estando pendiente en estrados judiciales el proceso, no
puede ejecutarse ninguna resolución.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 980


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Finalmente, manifiesta que dicho proveído fue devuelto con el memorial de 31 de octubre de
2011, aclarando que la Resolución Determinativa 35/2008, no se encuentra ejecutoriada y la
demanda ordinaria interpuesta contra la misma estaría en trámite, así como que la representación
legal de EMCOGAS S.A.M. corresponde a la comisión liquidadora y cualquier notificación
debió hacerse a esa instancia; no obstante, la Gerente Distrital a.i. de GRACO del SIN, ahora
demandada, mediante proveído 24-00511-11 de 10 de noviembre de 2011, notificado el 1 de
diciembre del mismo año, dispuso la prosecución de la ejecución tributaria conforme al art.
108.1 del Código Tributario Boliviano (CTB), aplicando medidas coactivas previstas en su art.
110, solicitando a la Dirección Ejecutiva de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero
(ASFI), ordene la retención de fondos de EMCOGAS S.A.M., encontrándose a esa fecha
retenidos por el Banco Nacional de Bolivia.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Los accionantes, alegan la vulneración del derecho al debido proceso, citando al efecto el art.
117.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se “declare procedente” la tutela y en consecuencia, sin efecto y valor legal alguno: a)
El Proveído de Ejecución Tributaria 24-00485-11 de 11 de octubre de 2011, por infringir el art.
231 del CTb.1992 y el Auto de 15 de diciembre de 2008; y, b) Las medidas precautorias
dispuestas, debiendo ordenarse la devolución de los “dineros” ilegal y arbitrariamente retenidos,
más daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Realizada la audiencia pública de consideración de la acción de amparo constitucional, el 3 de


febrero de 2012, en presencia de la parte accionante y de Raúl Javier Lazcano Murillo, actual
Gerente Distrital a.i. de GRACO del SIN, ambas partes asistidas por sus abogados patrocinantes,
según consta en el acta cursante de fs. 96 a 98, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, en audiencia ratificó el tenor íntegro de la acción de amparo


constitucional y haciendo uso de su derecho a la réplica, refirió que: 1) La Sala Social
Administrativa revocó la Resolución del Juez de primera instancia, quien rechazó la excepción
dilatoria de falta de personería interpuesta por la Administración Tributaria, señalando que dicho
Auto de Vista no admitía recurso de casación, por lo que el expediente fue devuelto al Juez a
quo, ante el cual se presentó memorial subsanando el supuesto defecto, el que además no existe
al haber sido las personas debidamente acreditadas, incurriendo por lo tanto en error, por lo que
el Juez determinó la admisión de la demanda, pidiendo se prosiga con la acción, toda vez que la
excepción previa no resuelve el fondo de la demanda y al ser dilatoria sólo tiene por objeto
corregir el procedimiento, solicitando además que la administración tributaria responda a la
demanda aplicando el art. 229 del CTb.1992; ante lo cual, peticionaron se revoque dicha acción,
accediendo al mismo, por lo que apelaron mediante recurso de compulsa, dando lugar a su
radicatoria ante la Sala Social y Administrativa, no pudiendo señalarse que el proceso esté
acabado; y, 2) Existe un proveído posterior que señala “estése a la suspensión del acto
impugnado” (sic), ordenado por el Juez de primera instancia y la certificación que se presentó en
calidad de prueba donde se establece que no hay una resolución final, por lo que la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 981


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Administración Tributaria carece de facultad para exigir que la Resolución Determinativa esté
firme.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Raúl Javier Lazcano Murillo, actual Gerente Distrital a.i. de GRACO del SIN, en el informe escrito
cursante de fs. 85 a 90 y en audiencia, afirmó: i) Del “lacónico” memorial de la acción, se advierte
la omisión de hechos jurídicos relevantes, por cuanto está dirigida contra el proveído de inicio de
ejecución tributaria 24-00485-11 y las consecuentes acciones de cobro, respecto a la deuda
tributaria declarada mediante Resolución Determinativa 35/2008, que según los accionantes, su
ejecución estaría suspendida en virtud a la demanda contencioso tributaria iniciada contra dicha
Resolución Determinativa; si bien es evidente que mediante Auto de 15 de diciembre de 2008, el
Juez a quo admitió la demanda y dispuso la suspensión de la ejecución del acto demandado, ello
fue cumplido por la Administración Tributaria, en tanto el proceso estuvo vigente; ii) Dentro la
referida causa, se interpuso excepción dilatoria de falta de personería en el demandante, prevista
en el art. 237 inc. 2) del CTb.1992, por cuanto el Poder 0910/2008 de 3 de diciembre, utilizado
por Raúl Artero Arcaya y Juan Carlos Orsini Puente, para representar a EMCOGAS S.A.M., no
fue inscrito en el registro de comercio en la Fundación para el Desarrollo Empresarial
(FUNDEMPRESA), no siendo oponible frente a terceros de acuerdo al art. 29.5 del Código de
Comercio (Ccom); iii) Por Auto de 5 de enero de 2009, el Juez a quo rechazó la excepción
opuesta por el fisco declarando improbada la demanda, interponiendo recurso de apelación,
resuelto por la Sala Social y Administrativa, mediante Auto de Vista 106/2010 de 10 de
septiembre, revocando el Auto de 5 de enero de 2009 y declarando probada la excepción de falta
de personería en el demandante; y debido a que el contribuyente no hizo uso del recurso de
casación contra el referido Auto de Vista, mediante Resolución de 16 de noviembre de 2010, fue
declarado formalmente ejecutoriado, concluyendo de esa manera la demanda contencioso
tributaria intentada por EMCOGAS S.A.M. en liquidación, contra la Resolución Determinativa
35/2008; iv) El Juez a quo, mediante proveído de 30 de noviembre de 2010, inexplicablemente y
en flagrante incumplimiento y contradicción a lo resuelto por Auto de Vista 106/2010 y el Auto
Ejecutoriado de 16 de noviembre de 2010, ilegalmente corrió en traslado la demanda
contencioso tributaria interpuesta por EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, justificando su ilegal
accionar en virtud del memorial de 29 de noviembre de 2010, mediante el cual se acreditaba
personería para una acción concluida con fallo ejecutoriado y cosa juzgada; v) Dicha conducción
procesal deficiente del juzgador, forzó a la Administración Tributaria plantear nulidad contra el
proveído de 30 de noviembre de 2010, emitiéndose el Auto de 4 de enero de 2011, por el cual el
Juez reconoció su supuesto error y dejó sin efecto el proveído de 30 de noviembre de 2010,
disponiendo recién y como era correcto el archivo de obrados, por no existir nada más que
tramitar; dilación procesal que fue bien aprovechada por la parte demandante, quien interpuso
recurso de apelación contra el Auto de 4 de enero de 2011, argumentando subsanación de su
representación, cuando la naturaleza del proceso no se lo permitía y que además fue
oportunamente excepcionada por el fisco con fallo ejecutoriado; y, vi) Ese es el origen de la
apelación aludida de contrario y el motivo por el cual el trámite actualmente radica en la Sala
Social y Administrativa y a la que hace referencia la certificación de 15 de diciembre de 2011,
presentada por el contrario, cuya tramitación es completamente intrascendental a los efectos del
Auto de Vista 106/2010, ejecutoriado y con valor de cosa juzgada formal, que puso fin al
proceso contencioso tributario y por ende, sin efecto legal el Auto de Admisión de 15 de
diciembre de 2008, devolviendo la competencia absoluta del Servicio de Impuestos Nacionales
sobre la Resolución Determinativa 35/2008 firme y constituida en título de ejecución tributaria,
facultando la aplicación de medidas coactivas previstas por el art. 110 del CTB, por lo que al
haber el Servicio de Impuestos Nacionales dispuesto el inicio del trámite de ejecución tributaria

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 982


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

conforme la Resolución Determinativa después de la ejecutoria del Auto de Vista 106/2010, que
puso fin a la demanda contencioso tributaria, no ha incurrido en acto ilegal alguno.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, constituida en


Tribunal de garantías, por Resolución de 3 de febrero de 2012, cursante de fs. 99 a 101 vta.,
denegó la acción de amparo constitucional, con los siguientes fundamentos: a) No se
acompañaron todos los actuados del proceso contencioso tributario que actualmente radica ante
la Sala Social y Administrativa; b) Debieron agotarse los mecanismos de reclamo ante las
autoridades ordinarias y administrativas antes de acudir a la vía constitucional, toda vez que no
se fundamenta ni precisa expresamente la concurrencia de las subreglas que rigen la aplicación
excepcional de la acción de amparo sin agotar los mecanismos legales ordinarios que prescindan
del cumplimiento del principio de subsidiariedad; y, c) La empresa accionante, no acreditó con
prueba suficiente haber acudido en reclamo de sus derechos a ninguna instancia ordinaria sobre el
incumplimiento a la orden de suspensión de la ejecución de la Resolución Determinativa 35/2008,
para que se establezca la nulidad del proveído de Ejecución Tributaria 24-00485-11, así como de
las medidas precautorias, por lo que al no haber agotado la vía correspondiente al efecto,
corresponde denegar la tutela por no haber cumplido el principio de subsidiariedad.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se concluye


lo siguiente:

II.1. Raúl Artero Arcaya y Juan Carlos Orsini Puente, en representación de EMCOGAS S.A.M.
en Liquidación, el 4 de diciembre de 2008, interpusieron demanda contencioso tributaria,
impugnando la Resolución Determinativa 35/2008 de 17 de noviembre, alegando que fue
emitida sin competencia y usurpando ajena jurisdicción (fs. 10 a 17).

II.2. Mediante Auto de 15 de diciembre de 2008, el Juez Primero de Partido Administrativo,


Coactivo Fiscal y Tributario del entonces Distrito Judicial de Cochabamba, admitió la demanda
contencioso tributaria y dispuso la suspensión de la ejecución del acto impugnado (fs. 20).

II.3. Veimar Mario Cazón Morales, Gerente Distrital a.i. de GRACO del SIN, opuso excepción
dilatoria de falta de personería dentro de la demanda contencioso tributaria interpuesta por
EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, contra la Resolución Determinativa 35/2008 (fs. 21 a 22
vta.).

II.4. Mediante Resolución de 5 de enero de 2009, el Juez arriba señalado, rechazó la excepción
dilatoria de falta de personería de los representantes del actor opuesta por GRACO y declaró
improbada la misma, con el fundamento que el contribuyente EMCOGAS S.A.M. en
Liquidación cumplió todos los requisitos exigidos por el art. 228 del CTb.1992, por lo que al
presentar su demanda no existiría falta de personería (fs. 25 a 27).

II.5. Por Auto de Vista 106/2010 de 10 de septiembre, la Sala Social y Administrativa del
Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, revocó el Auto de 5 de enero de 2009 y
declaró probada la excepción prevista por el art. 237.2 del CTb.1992, opuesta por la
Administración Tributaria (fs. 28 a 29 vta.). Fallo notificado al Presidente del Directorio y
Gerente General de EMCOGAS S.A.M., el 6 de octubre de 2010 (fs. 29 vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 983


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.6. El 29 de noviembre de 2010, Raúl Artero Ardaya y Juan Carlos Orsini Puente, por
EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, acompañando poder inscrito en FUNDEMPRESA,
solicitaron al Juez Primero de Partido Administrativo, Coactivo Fiscal y Tributario, que ordene a
GRACO Cochabamba del SIN, responder a la demanda contencioso tributaria bajo conminatoria
de ley (fs. 30). Mediante proveído de 30 de noviembre del mismo año, esta autoridad, dando por
apersonados a los representantes de la empresa, ordenó la notificación expresa del titular de
GRACO, para que dé cumplimiento a lo determinado en el art. 232 del CTb.1992 y “sea con el
Auto de Vista Nº 106/2010” (fs. 31).

II.7. A fs. 32 y vta., cursa la Resolución de 4 de enero de 2011, que resuelve la solicitud de
nulidad de “Auto de Admisión” y archivo de obrados presentada por la Gerencia Distrital de
GRACO del SIN, el 23 de diciembre de 2010, por la cual el Juez Primero de Partido
Administrativo, Coactivo Fiscal y Tributario, estableció que en el proveído de 30 de noviembre
del mismo año, existiría error involuntario de hecho, disponiendo que éste quede nulo y sin
valor legal, así como el archivo de obrados en cumplimiento al Auto de Vista 106/2010,
haciendo constar que el testimonio de poder 326/2010 habría sido inscrito en FUNDEMPRESA
en forma extemporánea por la empresa impetrante.

II.8. La Resolución antes descrita, fue apelada por EMCOGAS S.A.M. en Liquidación (fs. 34 a
36 vta.); recurso que fue rechazado por Auto de 11 de febrero de 2011, por extemporáneo (fs.
39). Posteriormente, el 18 del mismo mes y año, la empresa recurrente planteó recurso de
compulsa ante la negativa de concesión de la apelación contra el Auto de 4 de enero de 2011 (fs.
40 a 42); mismo que fue declarado legal a través del Auto de Vista 003/2011 de 11 de marzo,
pronunciado por la Sala Social Administrativa, disponiendo la radicatoria del proceso en ese
tribunal para su sorteo y resolución (fs. 43 a 44).

II.9. La Administración Tributaria notificó por cédula a EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, el


18 de octubre de 2011, con el proveído de inicio de ejecución tributaria 24-00485-11 del mismo
mes y año (fs. 46); cédula que fue devuelta por la Empresa, solicitando al SIN deje sin efecto
dicha notificación, alegando que la Resolución Determinativa 35/2008, no se encontraría
plenamente ejecutoriada porque “los actuados posteriores que respondieron a una errónea
interpretación del procedimiento (…) fueron objeto de apelación y al haberse (…) declarado
legal la compulsa (…) ha determinado (…) que se tenga que revisar todo lo obrado” (fs. 48 a
49).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes, alegan la vulneración del derecho al debido proceso de EMCOGAS S.A.M. en
Liquidación, por cuanto la autoridad demandada bajo el supuesto que no existiría orden judicial
expresa que disponga la suspensión de la ejecución de la Resolución Determinativa 35/2008,
prosiguió con la misma, pidiendo inclusive la retención de fondos pertenecientes a esta empresa,
cuando conforme lo previsto por el art. 231 del CTb.1992, interpuesta la demanda contencioso
tributaria, debe suspenderse la ejecución del acto, resolución o procedimiento impugnado. En
consecuencia, corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional, prevista por el art. 128 de la CPE, se instituye dentro del
nuevo orden constitucional, como una acción tutelar de defensa contra actos u omisiones
ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 984
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la misma
Constitución Política del Estado y la ley; previsión constitucional conexa con el art. 73 de la Ley
del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP).
En ese contexto, la Norma Fundamental enfatiza que esta acción tutelar puede presentarse por la
persona “…que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad
correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente,
siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados” (art. 129.I de la CPE).

III.2. En cuanto a la legitimación pasiva en la acción de amparo constitucional

La legitimación pasiva, es la coincidencia que existe con la calidad adquirida por un servidor
público o persona individual o colectiva que presuntamente -con actos u omisiones ilegales o
indebidas- ha provocado la restricción, supresión o la amenaza de restringir o suprimir derechos
y garantías constitucionales y consecuentemente, contra quien se dirige la acción; así, la
jurisprudencia y doctrina emitida por el Tribunal Constitucional anterior, que no resulta
contraria al nuevo orden constitucional, señaló sobre la legitimación pasiva en la acción de
amparo constitucional como: “…la calidad que se adquiere por la coincidencia que se da entre
la autoridad que presuntamente causó la violación a los derechos y aquella contra quien se
dirige la acción…” (SC 1745/2011-R de 7 de noviembre, haciendo cita de la SC 0264/2004-R
de 27 de febrero).

De donde resulta que, ante la vulneración de derechos y garantías debe interponerse la acción
tanto contra el servidor público, persona individual o colectiva que cometió la vulneración que
se alega, así como contra la que tiene facultad para revisarla, modificarla o en su caso dejarla sin
efecto; en ese entendido, la SC 0639/2010-R de 19 de julio, que hizo referencia a su vez a la SC
1445/2004-R de 7 de septiembre, manifestó que la acción de amparo constitucional debe
dirigirse: “...no sólo en contra de la autoridad que ejecutó el acto ilegal, sino también de
aquella que revisó esa actuación y no la corrigió”.

De esa manera, la legitimación pasiva no sólo la adquiere la persona que cometió el acto ilegal y
contra quien debe dirigirse la acción, a efecto que pueda responder por los supuestos actos
ilegales atribuidos en su contra, sino que también en los casos en que los actos denunciados de
lesivos a los derechos y garantías fundamentales devengan de un proceso judicial o
administrativo, la legitimación pasiva recae también sobre el Juez, Tribunal u órgano que
asumió la decisión y es quien además podrá modificar la supuesta vulneración; así, la SC
1761/2010-R de 25 de octubre, que se sustenta en el entendimiento asumido mediante la SC
1740/2004-R de 29 de octubre, señaló que: “…se establece que en aquellos casos en los que el
acto denunciado como ilegal es ejecutado por una autoridad y es otra la competente para
revisar esa actuación a efecto de modificar, confirmar o revocar el acto puesto en su
conocimiento, el recurso debe ser interpuesto contra ambas autoridades al tener legitimación
pasiva, la primera por ejecutar el acto ilegal y la segunda por no corregirlo, de modo que al ser
ambas responsables, deben asumir las consecuencias de sus actos”.

III.3. Análisis del caso concreto

Dentro de la problemática planteada, los accionantes consideran vulnerado el derecho al debido


proceso de EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, por cuanto activada la vía judicial, interpusieron
demanda contencioso tributaria impugnado la Resolución Determinativa 35/2008, mediante la
cual la Administración Tributaria determinó de oficio la obligación impositiva en la suma de
UFV`s 26 807 856.- correspondiente al tributo omitido, mantenimiento de valor e intereses por
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 985
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

el Impuesto Especial a los Hidrocarburos y sus Derivados (IEHD), de los periodos fiscales enero
a diciembre de 2004; demanda que si bien fue admitida mediante Auto de 15 de diciembre de
2008, por el Juez Primero de Partido Administrativo, Coactivo, Fiscal y Tributario, disponiendo
la suspensión de la ejecución de la referida Resolución Determinativa; a continuación, la
Administración Tributaria opuso dentro del proceso contencioso tributario, excepción dilatoria
de falta de personería, que fue resuelta por el Juez a quo, quien declaró improbada dicha
excepción y en apelación, fue revocada por la Sala Social y Administrativa, acto procesal con el
cual GRACO Cochabamba del SIN, supuestamente y a decir de los accionantes, de manera
ilegal y arbitraria, suponiendo que la vía judicial habría concluido al declararse improbada la
excepción planteada por la Administración Tributaria, notificaron a EMCOGAS S.A.M. en
Liquidación, con el proveído de inicio de ejecución tributaria 24-00485-11, resultando
supuestamente dicho actuar ilegal, por cuanto la interposición de la demanda contencioso
tributaria impedía la ejecución del acto o Resolución emitida por la Administración Tributaria.

No obstante a ello, los supuestos actos ilegales no pueden ser compulsados en sede
Constitucional, por cuanto de los datos del proceso y las pruebas arrimadas al mismo, se puede
evidenciar que si bien lo que se impugna como lesivo a los derechos de los accionantes es la
supuesta ilegal ejecución de la Resolución Determinativa por parte del Servicio de Impuestos
Nacionales, habiendo por ello accionado el amparo constitucional contra la Gerente Distrital a.i.
de GRACO del SIN; sin embargo, es preciso señalar que la determinación asumida por el
Servicio de Impuestos Nacionales, emerge de una decisión judicial pronunciada por el Juez
Primero de Partido Administrativo, Coactivo Fiscal y Tributario, quien no fue demandado en
esta acción, por cuanto, una vez que retornó el proceso a su Juzgado, los accionantes por
EMCOGAS S.A.M. en Liquidación, acompañando poder inscrito en FUNDEMPRESA, pidieron
al referido Juez ordene a GRACO Cochabamba del SIN, responda a la demanda contencioso
tributaria bajo conminatoria de ley; ante lo cual, mediante proveído de 30 de noviembre de 2010,
esta autoridad, dando por apersonados a los representantes de la empresa, ordenó la notificación
expresa del titular de GRACO del SIN, para que dé cumplimiento a lo determinado por el art.
232 del CTb.1992, así como lo resuelto por el Auto de Vista 106/2010; ante lo cual la
Administración Tributaria, solicitó al Juez de la causa la nulidad del supuesto “auto de
admisión” y el consiguiente archivo de obrados; pedido que fue resuelto por Auto de 4 de enero
de 2011, por el Juez referido, quien señaló que en el proveído de 30 de noviembre de 2010,
existiría un “error involuntario de hecho”, disponiendo por ello quede nulo y sin valor legal, así
como dispuso el archivo de obrados en cumplimiento al vigente y ejecutoriado Auto de Vista
106/2010, haciendo constar que el testimonio de poder 326/2010, habría sido inscrito en
FUNDEMPRESA extemporáneamente; aspectos éstos que hicieron deducir que la
Administración Tributaria procedió a la ejecución de la Resolución Determinativa ante la
determinación asumida por el Juez a quo a través de la Resolución de 4 de enero de 2011, por
cuanto dispuso el archivo de obrados del proceso contencioso tributario; consecuentemente, el
Juez que emitió esa resolución, igualmente tiene legitimación pasiva para ser demandado en la
presente acción, máxime si la acción de amparo constitucional no sólo debe estar dirigida contra
la autoridad que ejecutó el acto ilegal, sino igualmente contra aquella que pudo haberla
corregido.

De lo expuesto y de la jurisprudencia constitucional expresada en el Fundamento Jurídico III.2.


de esta Sentencia, a pesar de ser el acto generador de la vulneración de derechos alegado, el
proveído de ejecución tributaria 24-00485-11, se debe tomar en cuenta que éste emergió de una
resolución judicial emitida por el Juez Primero de Partido Administrativo, Coactivo Fiscal y
Tributario, quien por lo tanto debió igualmente ser demandado; al no haberlo hecho, no es
posible considerar los argumentos expresados por los accionantes.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 986


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por consiguiente, el Tribunal de garantías, al haber denegado la tutela impetrada, efectuó una
adecuada compulsa de los antecedentes del caso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confieren la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: APROBAR la Resolución de 3 de febrero de
2012, cursante de fs. 99 a 101 vta., pronunciada por la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Cochabamba; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada
en los términos expuestos en la presente Sentencia, con la aclaración que no se ingresó al
análisis de fondo de la problemática planteada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0124/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00359-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 03/12 de 9 de marzo de 2012 cursante de fs. 19 a 24, pronunciada dentro de
la acción de libertad, interpuesta por Abraham Quiroga Bonilla en representación sin mandato de
Juan Carlos Pérez Justiniano contra Erwin Jiménez Paredes, Juez Cuarto de Instrucción en lo
Penal en suplencia legal de su similar Décimo, ambos del departamento de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 8 de marzo de 2012, cursante de fs. 8 a 9 y vta., el accionante


expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 21 de marzo de 2011, su representado, mediante memorial, se apersonó al Fiscal de


Sustancias Controladas a pedir que se le señale audiencia para que preste su declaración
informativa policial. Al no haber obtenido respuesta, el 21 de noviembre del citado año, reiteró
su solicitud de presentación voluntaria; sin embargo hasta la fecha, no se fijó el verificativo; por
estas razones, en aplicación a lo dispuesto por el art. 223 del Código de Procedimiento Penal
(CPP) se vio obligado a recurrir ante el Juez Décimo de Instrucción en lo Penal, a efectos de que
se le recepcione su declaración para que pueda demostrar su no participación en ciertos hechos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 987
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ilícitos y estar a derecho, petitorio que lo efectuó el 2 de marzo de 2012 y hasta el día de
interposición de la presente acción de libertad, no se respondió, lo que le origina un estado de
indefensión, ocasiona retardación de justicia y no precautela su libertad física y de locomoción.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Alega como lesionados los derechos de su representado a la libertad física y de locomoción sin
citar al efecto ningún artículo de la Constitución Política del Estado.

I.1.3. Petitorio

Solicita se declare “procedente” la presente acción y se ordene al Juez demandado


que en el día, señale fecha día y hora de audiencia para que su representado preste su
declaración informativa policial.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

En audiencia pública celebrada el 9 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante de


fs. 14 a 18 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y Ampliación de la acción

El abogado y representante del actor, ratificó los fundamentos de su memorial de demanda y los
amplió indicando que: a) Un día antes a la audiencia de la presente acción, el Juez ahora
demandado, resolvió su memorial, pero sin dar cumplimiento al art. 123 del CPP, dado que
solamente decretó traslado al Ministerio Público, para que en plazo de cuarenta y ocho horas,
dicha instancia, presente informe de ley, omitiendo una vez más, fijar audiencia para que su
defendido preste su declaración informativa; y, b) Existe una persecución ilegal, habida cuenta
que su representado, se presentó de manera voluntaria, en dos oportunidades ante el Ministerio
Público y hasta la fecha no atendieron su solicitud.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Cuarto de Instrucción en lo Penal en suplencia legal de su similar Décimo, en informe escrito
cursante a fs. 13 vta. refirió lo que sigue: 1) Debido a los cargos en acefalia, se encuentra actuando en
suplencia legal desde el 24 de febrero de 2012; 2) De la lectura del memorial, presentado por el
accionante, se puede advertir que éste pretende que su autoridad ordene al Ministerio Público que
señale audiencia para su presentación espontánea, situación que al amparo de los arts. 54.2 y 279 del
CPP no corresponde; y, 3) Si bien acompaña a su memorial, sendas solicitudes presentadas al
Ministerio Público, no es menos cierto que no se conoce la respuesta de parte de dicha instancia, por
lo tanto, no se puede adelantar criterio, porque no se demostró con elementos probatorios que sus
solicitudes fueron negadas.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, el Juez Octavo de Sentencia del departamento de Santa Cruz,


constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 03/12 de 9 de marzo de 2012, cursante
de fs. 19 a 24, por la que denegó la tutela reclamada, bajo los siguientes argumentos: i) El
representado del accionante presentó un memorial, el viernes 2 de marzo de 2012 a horas 17:30,
del cual, la autoridad jurisdiccional demandada, decretó el lunes 5 del mismo mes y año,
disponiendo traslado al Ministerio Público para que en el plazo de cuarenta y ocho horas
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 988
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

informe sobre lo denunciado, lo que demuestra que se tramitó dentro de plazos razonables
establecidos por ley; ii) El accionante activó la vía ordinaria previo a acudir ante la jurisdicción
constitucional, por tanto, deberá seguir dicho trámite hasta su finalización; luego recién
procederá la acción de libertad de pronto despacho; y, iii) Al no haberse agotado la vía ordinaria
y estar pendiente al momento de la interposición de la presente acción, no corresponde otorgar la
tutela solicitada.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Por memorial presentado el 21 de marzo de 2011 ante el Fiscal de Materia adscrito a la
Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), Juan Carlos Pérez Justiniano,
representado del ahora accionante, solicitó fecha, día y hora para prestar su declaración
informativa, así como el careo con alguno de los coimputados, indicando que tuvo conocimiento
extraoficial a través de los medios de comunicación y amigos que se lo estaría pretendiendo
vincular con la investigación del proceso investigativo seguido por el Ministerio Público contra
Julio René Navia y otros, por la presunta comisión del delito de legitimación de ganancias
ilícitas y otros, (fs. 2 vta.). Escrito del que no consta respuesta alguna.

II.2. Mediante escrito presentado el 21 de noviembre del 2011, ante la misma instancia, el
representado del accionante se apersonó y reiteró su solicitud de señalamiento de audiencia para
prestar su declaración informativa policial, afirmando que se puede evidenciar que toda su
actividad es lícita; y el hecho de comprar y mejorar un terreno para luego venderlo al mejor
postor y la relación netamente comercial que tuvo con la esposa y madre de los coimputados, no
implica que su persona hubiere tenido una conducta reprochable penalmente, prueba de ello es
que en el allanamiento de su domicilio y precintado de sus movilidades no encontraron
sustancias controladas y el test salió negativo; en consecuencia, solicitó que si existiera en su
contra un mandamiento de aprehensión, requiera que se deje sin efecto, en virtud a su
presentación voluntaria (fs. 4).Tampoco consta respuesta a esa solicitud.

II.3. El memorial de 2 de marzo de 2012, el precitado Juan Carlos Pérez Justiniano, pidió al
Juez Décimo de Instrucción en lo Penal del departamento de Santa Cruz, la tutela constitucional
ante la negativa por parte de la Fiscalía y que se sirva “señalar fecha, día y hora de audiencia”
para que se reciba su declaración informativa policial (fs. 5 a 7).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que la autoridad jurisdiccional demandada lesionó los derechos de su


representado a la libertad física y de locomoción, porque cuando se apersonó a su despacho para
solicitar señale, día y hora de audiencia, a efectos que preste su declaración informativa policial,
en virtud a que en dos oportunidades anteriores pidió lo mismo a la Fiscal asignada al caso,
quien no dio respuesta alguna; y no obstante ello, en vez de fijarle el verificativo peticionado,
dispuso que la instancia fiscal preste un informe en el plazo de cuarenta y ocho horas. En
consecuencia, en revisión de la Resolución dictada por el Juez de garantías, corresponde
dilucidar si tales extremos son evidentes y si constituyen persecución, aprehensión,
procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales, a fin de conceder o denegar la tutela
solicitada.

III.1.Naturaleza jurídica de la acción de libertad y presupuestos de activación


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 989
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Previo a ingresar al análisis del caso concreto, es necesario referirnos a la naturaleza jurídica de
la acción de libertad. En ese orden y conforme al nuevo orden constitucional, la SCP 0037/2012
de 26 de marzo, señaló que: “Se trata de un mecanismo de defensa constitucional
extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la protección
inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la libertad física como de locomoción en
casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o indebidos por
parte de servidores públicos o de personas particulares; así como a la vida, cuando esté en
peligro.

Esta garantía de carácter procesal constitucional se encuentra consagrada en el art. 125 de la


CPE, donde dispone que: 'Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera
a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y, solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad'. Norma
constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP), la cual establece que su objeto es la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la libertad de locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de esos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de
restricción o supresión.

En tal sentido, debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está
diseñada sobre la base de dos pilares esenciales, el primero referente a su naturaleza procesal y
el segundo, compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que
configura el contenido esencial de esta garantía, es decir, su naturaleza procesal, se establece
que se encuentra revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada
por sus características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e
inmediación; procede contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no
reconoce fueros ni privilegios. Postulados que pueden ser inferidos de la norma constitucional
antes referida.

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se encuentra
configurado por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE, se
resumen en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la
libertad física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya
procesamiento indebido; y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida”.

III.2. Persecución ilegal o indebida

La libertad es un derecho fundamental de carácter primario, protegido y consagrado por el art.


23.I de la CPE que establece que toda persona tiene derecho a la libertad personal, y que ésta,
sólo podrá ser restringida en los límites señalados para asegurar el descubrimiento de la verdad
histórica en la actuación de las instancias jurisdiccionales, por su parte el parágrafo tercero del
mismo precepto constitucional dispone que nadie será detenido, aprehendido o privado de su
libertad, salvo en los casos y según las formas determinadas por la ley. La ejecución del
mandamiento requerirá que éste previamente hubiere emanado de autoridad competente y que
sea emitido por escrito. Condiciones de validez que han sido ampliamente analizadas y
desarrolladas por este, Tribunal. Es ese orden, el sistema constitucional de nuestro país, en
concordancia con el derecho comparado, previó un mecanismo procesal especializado de
protección al citado derecho, como es la acción de libertad.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 990
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la naturaleza jurídica de esta acción, así como de la norma constitucional transcrita


precedentemente, se identifica la existencia de presupuestos de activación, entre los que se
encuentran, los actos u omisiones que constituyan persecución ilegal o indebida, configuración
que por ser atinente a la problemática planteada y para fines pedagógicos, pasaremos a analizar a
continuación. En ese cometido, de la revisión jurisprudencial constitucional encontramos que,
entre otras, en las SSCC 0419/2000-R, 0266/2001-R, 0379/2001-R, 0384/2001-R y 1287/2001-
R, se afirmó que, la persecución ilegal o indebida: debe ser entendida “…como la acción de un
funcionario público o autoridad judicial que busca, persigue u hostiga a una persona sin que
exista motivo legal alguno ni una orden expresa de captura emitida por autoridad competente
en los casos establecidos por la ley, o cuando se emite una orden de detención, captura o
aprehensión al margen de los casos previstos por ley e incumpliendo las formalidades y
requisitos de ella"; requisitos que imprescindiblemente deben concurrir para que sean objeto de
análisis a través de la acción de libertad, así como, “…los hechos denunciados como
persecución indebida deben incidir directamente con el derecho a la libertad de los recurrentes,
caso contrario, la alegada persecución, no puede ser dilucidada a través del hábeas corpus,
conforme se ha establecido en las SSCC 0200/2002-R, 0486/2004-R; esta circunstancia, impide
conocer el fondo del recurso y determina su improcedencia” (SC 1738/2004-R de 29 de
octubre).

En un caso similar, en el que se demandó acción de libertad alegando persecución indebida,


resuelto mediante la SC 1616/2005-R de 12 de diciembre, se estableció lo siguiente:
“…consiguientemente, no se advierte que el actor hubiera estado indebida e ilegalmente
perseguido, por cuanto, (…), no se libró mandamiento de aprehensión en su contra y menos se
ejecutó el mismo y por ende, en los hechos no fue objeto de persecución u hostigamiento…”.

Bajo esta perspectiva, la SC 0237/2010-R de 31 de mayo, asumiendo el entendimiento adoptado


por la SC 0036/2007-R de 31 de enero, señaló que la persecución ilegal o indebida, implica la
existencia de los siguientes presupuestos: “1) la búsqueda u hostigamiento a una persona con el
fin de privarle de su libertad sin motivo legal o por orden de una autoridad no competente, y 2)
la emisión de una orden de detención, captura o aprehensión al margen de lo previsto por ley” .

Ahora bien, bajo el contexto de la nueva carta constitucional, en la SC 0641/2011-R de 3 de


mayo, se definió la persecución ilegal a partir de sus dos causes configurativos, los que darían
lugar a la activación de la acción de libertad restringida y preventiva. “En efecto, bajo el primer
cauce configurativo de este presupuesto de activación de la acción de libertad, se establece que
la persecución ilegal o indebida, debe ser entendida como toda acción ilegal cometida por un
funcionario público o un particular, conducta que implica una manifiesta y evidente
persecución, acoso, búsqueda u hostigamiento, sin que exista una justa causa fundada en
derecho, destinada a suprimir, restringir, perturbar o limitar el derecho a la libertad física, la
vida o algún otro derecho estrictamente vinculado a éstos dos últimos; afectaciones que por su
naturaleza, inequívocamente deben ser tuteladas a través de la acción de libertad, aspecto que a
la luz de la tipología de la acción de libertad ya desarrollada por la SC 0044/2010-R de 20 de
abril, se enmarca dentro de lo que en doctrina se conoce como 'Habeas Corpus' restringido.
Asimismo, debe precisarse que el segundo cauce configurativo de la persecución ilegal tutelable
a través de la acción de libertad, está constituido por todo acto que merced a una orden de
detención, captura o aprehensión, que no cumpla con los presupuestos procesales establecidos
para su legal emisión, esté destinada a suprimir, restringir o limitar el derecho a la libertad
física o incluso a la vida, supuestos fácticos que deben ser protegidos a través de la acción de
libertad bajo la figura conocida en doctrina como 'Habeas Corpus preventivo' y desarrollada
por la SC 0044/2010-R de 20 de abril entre otras”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 991


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Finalmente, y siguiendo la doctrina penal, la SC 0021/2011-R de 7 de febrero, dispone que:


“…se entiende que la persecución indebida debe verse materializada en actos o acciones que
permitan concluir la existencia de una amenaza a este derecho, en consecuencia, si no se
advierte la orden o emisión de ningún mandamiento que disponga la privación de libertad
personal o de locomoción del actor, no es posible admitir que éste estuviera indebida o
ilegalmente perseguido, por cuanto, es irracional suponer que podría ejecutarse una
disposición que no existe ni existió jamás, y en los hechos, el accionante nunca pudo ni podrá
ser objeto de persecución ni hostigamiento”.

De lo anotado, se concluye que la persecución ilegal o indebida como presupuesto de activación


de la acción de libertad, comprende a su vez, dos supuestos, el primero referido al hostigamiento
sin motivo legal, ni orden de privación de libertad física y/o de locomoción emitida por
autoridad competente; y el segundo relativo a las órdenes de restricción de libertad al margen de
los casos previstos por ley y sin cumplir con los requisitos y formalidades legales exigidas. En el
primer caso, como indica la jurisprudencia, estamos frente a lo que la doctrina menciona como,
hábeas corpus restringido; y tanto que la segunda forma está relacionada con el hábeas corpus
preventivo.

En conclusión, el hábeas corpus restringido está destinado a la protección de la libertad física


y/o libertad de locomoción, cuando éstas sufren molestias, obstáculos, incomodidades,
interrupciones o perturbaciones sin que medie fundamento legal, encuentra su cimiento en los
arts. 125 de la CPE y 66.2 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), por
tanto, vía acción de libertad, se protegerán los derechos citados supra, aún cuando no se
evidencie una amenaza inminente de privación de libertad, pero su ejercicio se vea afectado de
alguna manera, en virtud a que la teleología de este medio de defensa tiende a la protección de
bienes jurídicos de carácter primario, como son la vida y la libertad; no obstante ello, a tiempo
de su activación deberá demostrarse que la amenaza es cierta y evidente, y no conjetural o
presuntiva, lo que significa que es un requisito para la procedencia de la acción, la demostración
de la existencia positiva y material de la amenaza o restricción de la libertad.

III.3. Análisis del caso concreto

En la problemática planteada, el accionante refiere que su representado presentó dos memoriales, el


primero de ellos, el 21 de marzo de 2011; y el segundo, el 21 de noviembre del mismo año, pidiendo
al Fiscal de Materia adscrito a la FELCN que “señale fecha, día y hora para prestar su declaración
informativa policial”; porque a su decir, se enteró de manera extraoficial a través de los medios de
comunicación y amigos que se estaría pretendiendo vincularlo con una investigación que el
Ministerio Público sigue contra Julio René Navía y otros, por la presunta comisión de los delitos de
legitimación de ganancias ilícitas y otros; motivo por el cual, solicitó declarar con la finalidad de
desvirtuar algún vínculo de su persona con hechos inmersos en la Ley del Régimen de la Coca y
Sustancias Controladas; no obstante ello, ante la falta de respuesta, el 2 de marzo de 2012, acudió ante
el Juez Décimo de Instrucción en lo Penal, en pos de tutela constitucional, reiterando una vez más,
similar petitorio; es decir, señale audiencia para recepcionar su respectiva declaración. Autoridad
jurisdiccional que en vez de fijar el verificativo solicitado, decretó el traslado al Ministerio Público,
para que en el plazo de cuarenta y ocho horas, dicha instancia eleve un informe respecto a la
denuncia. Actuación esta última que demanda de ilegal, y considera lesiva de su derecho a la libertad
porque se siente ilegalmente perseguido y teme que se emita en su contra algún mandamiento de
aprehensión.

De lo anotado, en primer lugar, se infiere que en el caso de análisis, no se emitió mandamiento de


aprehensión alguno, por lo tanto, la problemática planteada queda fuera del alcance de protección del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 992
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

hábeas corpus preventivo, y el hecho de temer la posibilidad de su emisión no constituye causal


suficiente que permita abrir la tutela de la presente acción constitucional, porque no existe un acto
material que restrinja el derecho a la libertad del representado del accionante y por lo tanto, no es
posible deducir que fuere objeto de persecución ilegal o indebida.

En segundo término, corresponde analizar si los hechos denunciados configuran hostigamiento por
parte de la autoridad jurisdiccional ahora demandada, a efectos de configurar la forma restringida de
protección de la acción de libertad; en ese cometido, se deberá comprobar si en el caso, se ejecutaron
conductas destinadas a restringir el ejercicio del derecho a la libertad del representado del accionante,
sin que medie una causa justa, caso que de verificarse, sin duda ingresaría dentro del ámbito de
protección de la presente acción. Aspecto que en definitiva tampoco figura, porque no se constata
ninguna conducta por parte de la precitada autoridad que implique afectación, amenaza y menos
hostigamiento que moleste, obstaculice, incomode, interrumpa o perturbe el mencionado derecho, por
lo tanto, no se cumple con el presupuesto de activación, dado que no consta persecución indebida ni
ilegal, por cuanto, la falta de respuesta a su solicitud de señalamiento de audiencia para prestar su
declaración informativa policial, no conlleva la presunción de una persecución, lo que sin duda no
excluye la obligación legal de toda autoridad pública de dar respuesta pronta y oportuna a las
peticiones presentadas por los interesados o afectados.

Si bien el accionante indica que su representado, se presentó de manera espontánea ante la autoridad
demandada, demostrando su actitud de colaboración, y como señala, para estar a derecho y evitar de
esa forma, que se emita en su contra, un probable mandamiento de aprehensión; sin embargo, la
posibilidad de su emisión, es un hecho incierto y se consolidará únicamente si es que el actor fuera
citado legalmente dentro del proceso a declarar y éste no concurriera ante dicho llamado, actuaciones
jurisdiccionales que entran dentro de la esfera de la incertidumbre, porque podrían llegar a suscitarse
o de lo contrario, no ocurrir jamás, por lo tanto, no es posible tutelar, vía acción de libertad, un temor
situado únicamente en el fuero interno de quien se cree perseguido indebida o ilegalmente, porque
como se demostró, no existe amenaza positiva ni material alguna a su libertad, y su estado de
supuesta zozobra no es causal suficiente que permita activar este medio de defensa.

En virtud a lo señalado, al no haberse vulnerado ni puesto en peligro la libertad personal o de


locomoción de Juan Carlos Pérez Justiniano, ya que no se encuentra privado de libertad, y es más, el
demandado no emitió ningún mandamiento de privación de libertad en su contra que permita
presumir que ésta se encuentra ilegalmente amenazada y menos, ejecutado ninguna conducta u
omisión que impida el ejercicio irrestricto del mencionado derecho, como tampoco de las autoridades
fiscales que se encuentran bajo su control jurisdiccional; a lo que se agrega que las supuestas
vulneraciones en la dilación de su solicitud, no inciden directamente en su libertad, no es posible
dilucidar el fondo de lo reclamado a través de esta acción tutelar, por cuanto el actor no fue hostigado
ni perseguido al no existir orden ni conducta alguna con ese objeto, por parte de ninguna autoridad.

En consecuencia, las presuntas irregularidades que impliquen persecución ilegal o indebida que no
incidan directamente en la lesión a la libertad física o de locomoción, deben ser impugnados por
medio de los recursos ordinarios previstos por ley ante las autoridades judiciales competentes, y en
caso de considerar que las supuestas lesiones no fueron reparadas, una vez agotadas éstas, queda
abierta la vía de la acción de amparo constitucional. En ese sentido, al no existir evidencia de que se
hubiese hostigado, perturbado o amenazado la libertad ambulatoria del representado del accionante, la
persecución acusada de ilegal determina la denegatoria de la presente acción, conforme se dejó
establecido por las líneas jurisprudenciales glosadas.

Por los fundamentos expuestos, se concluye que el Juez de garantías al haber denegado la
acción de libertad, evaluó correctamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 993
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 03/12 de
9 de marzo de 2012, cursante de fs. 19 a 24, dictada por el Juez Octavo de Sentencia del
departamento de Santa Cruz; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0126/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00161-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión, la Resolución de 18 de enero de 2012, cursante de fs. 18 vta. a 24, pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Graciela Ingrid Alvarado Banegas en
representación sin mandato de Yasmany Terra Banegas contra Fernando Orellana Medina,
Juez Tercero de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Santa
Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

En el memorial presentado el 13 de enero de 2012, cursante a fs. 9 y vta., la accionante, por su


representado, manifiesta lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido por el Ministerio Público por el supuesto delito de robo, se
encuentra detenido injustamente hasta la fecha de presentación de la acción; por cuanto el Juez
ahora demandado dispuso su detención preventiva el 21 de septiembre de 2010, sin que exista
acta de audiencia cautelar ni fundamentación legal que la respalde. Asimismo, su memorial de
16 de noviembre de 2011 no ha tenido respuesta.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Sin especificar los derechos vulnerados, cita los arts. 22, 23 “Inc. 1.3 4”, 115, 179, 180 y 256
“Inc.3” de la Constitución Política del Estado (CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 994


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

La accionante no formuló petición concreta en el memorial de acción de libertad.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 18 de enero de 2012, según consta en acta cursante de fs. 18 a
24, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de la accionante ratificó la demanda y amplió la misma, señalando: “…para que se


tenga que enviar a una persona al Centro de Rehabilitación de Palmasola detenida (…) debe
haber un mandamiento de aprehensión, librado por autoridad competente, acompañada por el
acta de audiencia cautelar…” (sic), que al no existir, se configura que está ilegalmente
perseguida y al mismo tiempo indebidamente procesada.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, en audiencia expresó: a) En la fecha señalada por la


parte accionante -21 de septiembre de 2010- se encontraba con secretario suplente, por ello
procuró ubicar el acta de imputación, enterándose que no existía en el cuaderno procesal;
además, desconoce el memorial que habría sido presentado. Con relación al escrito de 26 de
noviembre, no fue despachado, porque se encontraba con personal recién posesionado; b) Con
relación a la inexistencia del acta y el mandamiento, los jueces dictan su resolución en audiencia
aplicando los principios de oralidad y de inmediatez, consecuentemente, existe un mandamiento
de detención preventiva, en cuanto al acta, es responsabilidad del secretario quien debe elaborar
las mismas y en caso de inexistencia, están los procedimientos administrativos para sancionar
por incumplimiento de sus deberes; y, c) El uso de la acción de libertad tiene que tener un límite,
el no haber despachado oportunamente un memorial, no puede ser causal de ilicitud de una
detención preventiva, siendo que no ha incumplido con sus deberes y no puede resolver un
memorial que no ha pasado a su despacho.

I.2.3. Resolución

El Juez Octavo de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, constituido
en Juez de garantías, dictó la Resolución de 18 de enero de 2012, cursante de fs. 18 vta. a 24, por
la cual denegó la acción de libertad, sin responsabilidad civil ni costas, con los siguientes
fundamentos: 1) La privación de libertad fue por decisión de la autoridad judicial y no así por
falta de acta de audiencia de medida cautelar; 2) La protección que brinda la acción de libertad
alcanza al debido proceso cuando está vinculado directamente al derecho a la libertad personal o
locomoción, en otros casos, debe ser reparada por los mismos órganos jurisdiccionales que
conocen la causa, sólo una vez agotados, se podrá acudir a la vía jurisdiccional constitucional; 3)
En el presente caso, no cursa ninguna solicitud de cesación de la detención preventiva vinculada
con la libertad personal del accionante que ponga en evidencia una posible dilación indebida; y,
4) Existen mecanismos procesales específicos de defensa para restituir el derecho a la libertad y
la persecución o procesamiento indebido, que deben ser utilizados previamente por el afectado.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 995


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las


siguientes conclusiones:

II.1. A fs. 5 cursa memorial de 16 de noviembre de 2011, presentado por el representado de la


accionante, ante Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, por el cual solicita certificación y copia
legalizada del acta y auto de medida cautelar de 21 de septiembre de 2010. No cursa constancia
de recepción del documento en el Juzgado, tampoco número del Sistema IANUS.

II.2. De fs. 6 a 7 Certificado de Permanencia y Conducta, expedido por el Director del Centro de
Rehabilitación de Palmasola, refiere que Yasmany Terra Banegas, ingresó por quinta vez el 1 de
marzo de 2010, con mandamiento de detención preventiva ordenado por el Juez Tercero de
Instrucción en lo Penal, ahora demandado, dentro del proceso penal seguido en su contra por el
delito de robo agravado y asociación delictuosa, permaneciendo hasta el momento de la emisión
del informe un año, un mes y seis días.

II.3. De la revisión minuciosa del expediente, se evidencia la inexistencia del memorial de


solicitud de cesación a la detención preventiva que pudiera justificar la inatención por parte del
juez demandado.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia que su representado se encuentra detenido injustamente, sin que exista
acta de audiencia cautelar, habiéndose ordenado su detención preventiva sin fundamentación
que la respalde y sin que sus memoriales, como el de 21 de septiembre de 2010, hayan tenido
respuesta hasta la fecha. En consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos
son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. De la finalidad y los alcances de la acción de libertad

El art. 125 de la CPE, establece que la acción de libertad tiene por objeto tutelar los derechos a
la vida, a la libertad física y de locomoción, en los casos en que aquélla se encuentre en peligro y
cuando ésta sea objeto de persecución ilegal, indebido procesamiento u objeto de privación en
cualquiera de sus formas, pudiendo toda persona que considere encontrarse en tales situaciones,
acudir ante el juez o tribunal competente en materia penal y solicitar se guarde tutela a su vida,
cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a
la libertad. Así, la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, en la SC 0011/2010-R de 6 de
abril, estableció: “La acción de libertad, es una acción jurisdiccional de defensa que tiene por
finalidad proteger y/o restablecer el derecho a la libertad física o humana, y también el derecho
a la vida, si es que se halla en peligro a raíz de la supresión o restricción a la libertad personal,
sea disponiendo el cese de la persecución indebida, el restablecimiento de las formalidades
legales y/o la remisión del caso al juez competente, la restitución del derecho a la libertad
física, o la protección de la vida misma, motivo por el cual se constituye en una acción tutelar
preventiva, correctiva y reparadora de trascendental importancia que garantiza como su
nombre lo indica, la libertad, derecho consagrado por los arts. 22 y 23.I de la CPE”.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

La SC 0627-R/2010 de 19 de julio, estableció que la acción de libertad: “…sólo puede ser


activada cuando de manera previa se han agotado los mecanismos procesales específicos de
defensa idóneos, a efecto de que sea la autoridad que conoce el caso repare las supuestas
lesiones a la libertad física o individual del imputado…“. Del mismo modo, a través de la SC
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 996
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

0008/2010-R de 6 de abril, se concluyó que: “La acción de libertad es el medio idóneo y eficaz
para conocer y restituir cualquier tipo de lesión o vulneración que pueda atentar al derecho a
la vida, la libertad o constituir una persecución o procesamiento indebido que atente o ponga
en peligro el derecho a la libertad, cuando de acuerdo a las circunstancias concretas, a pesar
de existir mecanismos de protección específicos y establecidos por la ley procesal vigente, éstos
resulten ser evidentemente inoportunos o inconducentes, de manera tal que esta acción de
defensa, por la urgencia de la situación, se configura como el medio más eficaz para restituir
los derechos afectados; empero, en caso de existir mecanismos procesales específicos de
defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para restituir el derecho a la libertad y a la
persecución o procesamiento indebido, deben ser utilizados previamente por el o los afectados;
en estos casos, por tanto, la acción de libertad operará solamente en caso de no haberse
restituido los derechos afectados a pesar de haberse agotado estas vías específicas”.

Precisando aún más esta línea jurisprudencial, SC 0888/2010-R de 10 de agosto, señaló: “…la
existencia de la garantía constitucional en análisis, no implica que todas las lesiones al derecho
a la libertad tengan que ser necesariamente reparadas de manera exclusiva y excluyente a
través de la acción de libertad; pues no se trata de una garantía destinada a reparar, en
exclusiva todas las formas de lesión a la libertad que pudieran invocarse, sino la de dotar a la
persona de un medio de defensa sencillo, eficaz y oportuno, para restablecer la lesión sufrida
(…) En consecuencia, en los supuestos en que la norma procesal ordinaria de manera
específica prevea medios de defensa eficaces y oportunos para resguardar el derecho a la
libertad supuestamente lesionado, estos deben ser utilizados, previamente, circunstancia en la
que excepcionalmente el recurso de acción de libertad operará de manera subsidiaria (…)".

Por consiguiente, de acuerdo a la jurisprudencia glosada líneas arriba, se tiene que ante una
presunta vulneración del derecho fundamental a la libertad, antes de acudir a la jurisdicción
constitucional, se debe en principio denunciar todos los actos procesales defectuosos a través de
los mecanismos citados precedentemente, debiéndose agotar los mismos en la vía jurisdiccional
correspondiente

III.3. El análisis del caso

De la revisión a los antecedentes procesales, se evidencia que Yasmany Terra Banegas, fue
cautelado el 23 de septiembre de 2010, habiéndose dispuesto su detención preventiva por orden
del Juez Tercero de Instrucción en lo Penal, dentro del proceso penal que se le sigue a instancias
del Ministerio Publico, por la presunta comisión de los delitos de robo agravado y asociación
delictuosa, sin que se hubiese demostrado que respecto de la medida cautelar aplicada en su
contra, hubiese interpuesto el correspondiente recurso de apelación incidental, como medio
idóneo, eficiente y oportuno para restituir su derecho a la libertad o la persecución y
procesamiento indebido de la que aduce ser víctima, instancia en la que bien podía alegar la falta
de fundamentación legal de la Resolución correspondiente y la ausencia del acta de la audiencia
cautelar.

En cuanto a la falta de respuesta de su memorial por el cual solicita certificación y copia


legalizada del acta de medida cautelar; ello corresponde ser resuelto a través de los medios
ordinarios intra proceso y en su caso, de manera subsidiaria por vía del amparo constitucional,
puesto que la supuesta falta de atención a sus memoriales que aduce, no inciden de manera
inmediata ni directa sobre su derecho a la libertad.

III.4. Por último, en relación a lo informado por el Juez demandado, en cuanto al manejo de las
actas y demás piezas procesales relacionadas con el proceso que motiva la presente acción de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 997
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

libertad; a los efectos de establecer las responsabilidades que correspondan, emergentes de la


presunta pérdida de documentos, falta de elaboración de actas, incumplimiento en pasar
memoriales a despacho del Juez, etc., se dispondrá remitir los antecedentes al Consejo de la
Magistratura a los efectos de la investigación que corresponda.

Por lo precedentemente señalado, el caso no se encuentra dentro de las previsiones y alcances de


la acción de libertad, por lo que el Juez de garantías, al haber denegado la tutela, ha actuado
correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º APROBAR la Resolución de 18 de enero de 2012, cursante de fs. 18 vta. a 24, pronunciada


por el Juez Octavo de Sentencia del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz; y en
consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de
fondo de la problemática planteada.

2º Disponer la remisión de los antecedentes al Consejo de la Magistratura, a los efectos de lo


señalado en el Fundamento Jurídico III.4.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0127/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00126-2012-01-AL
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución de 15 de febrero de 2012, cursante de fs. 333 a 336, pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Jorge Gemy Sánchez contra Zulema Javier
López, Jueza de Instrucción Mixta de Cabezas, provincia Cordillera del departamento de
Santa Cruz y Freddy Durán Montero, Fiscal de Materia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 14 de febrero de 2012, cursante de fs. 323 a 327, el accionante
expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 998
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 6 de agosto de 2010, se inició una investigación contra su hermano por la supuesta comisión
del ilícito de lesiones en accidente de tránsito; que luego fue atribuido a su persona y en cuyo
curso, el 14 de noviembre de 2011, pidió a la Jueza de Instrucción Mixta de Cabezas, que el
representante del Ministerio Público se pronuncie sobre la causa, sea por un rechazo de las
actuaciones policiales o por la imputación formal; a lo que el 25 de ese mes y año, el Fiscal
demandado, faltando al principio de objetividad, requirió imputación por varios delitos, como
ser “concurso ideal”, encubrimiento, homicidio, lesiones graves y gravísimas en accidente de
tránsito en grado de tentativa y omisión de socorro, demostrando parcialidad. En mérito a la
imputación, por Resolución de 23 de diciembre de igual año, se dispuso su detención preventiva.

Posteriormente, el 27 de diciembre de 2011, solicitó cesación de la medida cautelar; señalando


la Jueza de Instrucción Mixta de Cabezas, audiencia para el 19 de enero de 2012, donde pese a
la legal notificación de los sujetos procesales, la autoridad dispuso la suspensión del acto por
inasistencia del Fiscal, determinación que fue objeto de recurso de reposición, alegando que esta
situación no es causal de nulidad, menos de suspensión, acompañando al efecto diferentes
Sentencias Constitucionales; sin embargo, la autoridad judicial sostuvo que éstas no son de
cumplimiento obligatorio, no obstante de haber invocado el art. 203 de la Constitución Política
del Estado (CPE), sosteniendo que cursaba una circular de la “Corte Superior de Distrito”, que
exigía la presencia del Fiscal en todas las audiencias de cesación a la detención preventiva, para
finalmente a su conclusión, señalar nuevo verificativo para el 24 de enero del año en curso, sin
que en el acta se consignara el recurso de reposición planteado, menos su resolución.

El 24 de enero de 2012, nuevamente se suspendió la audiencia, por falta de notificación a los


sujetos procesales, fijándose nueva fecha para el 26 del mismo mes y año; que no obstante de ser
la tercera vez, tampoco se realizó, debido a una recusación promovida por la parte adversa, a
cuya consecuencia, los antecedentes se remitieron al Tribunal Departamental de Justicia de
Santa Cruz para su revisión, enviándose el cuaderno procesal al Juez Primero de Instrucción en
lo Penal de Camiri, donde una vez radicado el expediente, nuevamente solicitó audiencia, que
fue programada para el 8 de febrero del mismo año; empero, la querellante alegando estar
delicada de salud, sin acompañar prueba o justificativo, solicitó su suspensión.

Finaliza afirmando que la cesación a la detención preventiva es viable, por contar con “arraigo
natural plenamente demostrado y demostrable”, cuya valoración de pruebas corresponderá
únicamente a la Jueza de Instrucción Mixta de Cabezas; empero, el accionar negligente del
Fiscal y las peticiones injustificadas y dilatorias de la denunciante, han tornado la detención en
ilegal.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El accionante estima lesionado su derecho a la libertad, citando al efecto los arts. 22 y 23.I de la
CPE.

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes solicita se declare “procedente” la acción con costas, y la aplicación de
medidas sustitutivas a la detención preventiva a su favor.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 999


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Efectuada la audiencia pública el 15 de febrero de 2012, en presencia del accionante y su


abogado defensor; ausentes las autoridades demandadas, según consta en el acta cursante de fs.
333 a 336, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante hizo referencia al retiro de la demanda de acción de libertad cursante
a fs. 330, señalando que fue interpuesta por los anteriores patrocinantes de su defendido;
solicitando la inmediata remisión del cuaderno procesal al Juzgado de Instrucción en lo Penal de
Camiri, a efecto de evitar actos de nulidad, considerando que al día siguiente se celebraría la
audiencia de consideración de la cesación a la detención preventiva.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El Fiscal demandado, Freddy Durán Montero, pese a su legal citación (fs. 392), no asistió a la
audiencia ni presentó informe escrito.

Zulema Javier López, Jueza de Instrucción Mixta de Cabezas, no fue citada con la acción de
libertad, según la distancia de 150 km entre el Juzgado y el domicilio de la autoridad demandada
y que el accionante no demostró interés para efectuar la citación. En consecuencia, la autoridad
judicial demandada no asistió a la audiencia ni presentó informe escrito.

I.2.3. Resolución

El Juez Primero de Partido y de Sentencia de Camiri, provincia Cordillera del departamento de


Santa Cruz, constituido en Juez de garantías, dictó la Resolución de 15 de febrero de 2012,
cursante de fs. 333 a 336, por la que denegó la tutela, con los siguientes fundamentos: i) En
vista del retiro de la acción de libertad y desistimiento formulado por el accionante mediante
escrito sin fecha cursante a fs. 330, en estricta observancia de los arts. 126.II de la CPE y 68.7 de
la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), dispuso la prosecución del trámite de
la acción hasta pronunciar sentencia; ii) La falta de objetividad del representante del Ministerio
Público, debió ser reclamada al Juez contralor de garantías constitucionales, por cuanto el
imputado tiene todos los medios legales para acudir ante esta autoridad, haciendo uso de los
recursos que franquea la ley; al no haberlo hecho, se establece que el accionante no agotó la vía
ordinaria; iii) Las diferentes suspensiones de audiencia sin justificativo alguno son irregulares,
pues la inasistencia del acusador particular y del Ministerio Público, no es causal de suspensión,
debiendo desarrollarse la audiencia de manera indefectible, citando al efecto la SC 0224/2004-R
de 16 de febrero; empero, esta anomalía e irregular acto de la autoridad demandada, ha sido
consentida y convalidada por la parte accionante, al haber aceptado la suspensión de la primera
audiencia y consentir posteriores señalamientos, puesto que tampoco cursa en el expediente los
recursos o reclamos efectuados de manera oportuna para impugnar el acto ilegal, habiendo
precluido su derecho; iv) La acción de libertad no puede activarse mientras existan mecanismos
de defensa eficaces e idóneos para resguardar el derecho a la libertad supuestamente lesionado,
los mismos deben ser utilizados previamente y en caso de persistir la lesión recién se activa esta
acción tutelar, conforme a las SSCC 0160/2005-R, 0008/2010-R, 0067/2010-R, 0181/2005-R; y,
v) Al estar remitido el expediente al Juez de Instrucción de Camiri, como emergencia de una
recusación a su similar de la localidad de Cabezas, no es posible disponer que esta última
autoridad siga conociendo el proceso.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1000


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. Por memorial de 27 de diciembre de 2011, Jorge Gemy Sánchez, solicitó la cesación a la
detención preventiva. La autoridad judicial, por decreto de 28 del mismo mes y año, señaló
audiencia de consideración para el 19 de enero de 2012 (fs. 237 a 238).

II.2. A fs. 286 y vta. de obrados, cursa acta de audiencia de consideración de la solicitud de
cesación a la detención preventiva, en la cual, la autoridad judicial, ante la inasistencia del
representante del Ministerio Público, suspendió el acto, señalando nueva audiencia para el 24 de
enero de 2012.

II.3. A fs. 328 de obrados, cursa auto de admisión de la acción de libertad, por el cual, el Juez de
garantías fijó audiencia para el 15 de febrero de 2012.

II.4. Cursa formulario de notificación, por el cual se “notificó” a la autoridad demandada (Fiscal
de Materia de Camiri) con el señalamiento de audiencia de consideración de la acción de
libertad (fs. 329).

II.5. Amparado en el art. 24 de la CPE, a través del memorial que cursa a fs. 330, el accionante,
posterior a la citación al representante del Ministerio Público y antes de la realización de la
audiencia, solicitó el retiro de la demanda, formuló desistimiento y pidió el archivo de la acción
de libertad.

II.6. No cursa en el expediente, formulario de notificación ni constancia de la legal citación a la


Jueza de Instrucción en lo Penal de Cabezas, autoridad judicial demandada, con la presente
acción de libertad.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia la vulneración de su derecho a la libertad, por cuanto la Jueza de


Instrucción en lo Penal de Cabezas, injustificadamente y sin fundamento legal alguno suspendió
la audiencia de cesación a la detención preventiva, alegando la inconcurrencia del representante
del Ministerio Público. El Fiscal codemandado, efectuó imputación por un cúmulo de delitos,
faltando al principio de objetividad, demostrando parcialidad. En consecuencia, corresponde en
revisión, verificar si tales extremos son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela
solicitada.

III.1. Sobre las citaciones con la demanda de acción de libertad a los demandados

El art. 125 de la CPE, establece que la acción de libertad tiene por objeto tutelar los derechos a
la vida, a la libertad física y de locomoción, en los casos en que aquélla se encuentre en peligro y
cuando ésta sea objeto de persecución ilegal, indebido procesamiento o de privación en
cualquiera de sus formas, pudiendo toda persona que considere encontrarse en tales situaciones,
acudir ante el juez o tribunal competente en materia penal y solicitar se guarde tutela a su vida,
cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a
la libertad.

Respecto a la tramitación de la acción de libertad, la misma Norma Fundamental en su art. 126.I,


en sintonía con el art. 68.2 de la LTCP, establece que una vez presentada la acción, el juez o
tribunal de garantías de manera inexcusable debe señalar audiencia para considerar la misma
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1001
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

dentro de las veinticuatro horas. Con dicha determinación, la autoridad o persona demanda
deberá ser citada personalmente o mediante cédula, no pudiendo suspenderse la audiencia bajo
ninguna circunstancia, debiendo continuar hasta su conclusión con la emisión de la sentencia.
Nótese que la normativa vigente, respecto a la citación con la acción de libertad, no reconoce
otra modalidad que no sea la personal o mediante cédula.

La citación debe entenderse como el acto procesal, mediante el cual se emplaza al demandado
para contestar a la demanda; constituye una formalidad de suma importancia para otorgar la
plena validez del proceso y es además, una garantía esencial del principio de contradicción, al
considerarse que, por un lado, la parte queda a derecho y por el otro, cumple con la función
comunicacional de poner en conocimiento al demandado sobre la iniciación de una acción en su
contra y del contenido íntegro de la misma. La citación es entonces, la expresión esencial de la
garantía del derecho a la defensa y elemento básico del debido proceso, puesto que ante su
incumplimiento, de acuerdo a las formas establecidas en la Constitución Política del Estado, se
pondría al demandado en absoluto estado de indefensión, cuando en su art. 115.II, reconoce
expresamente que el Estado garantiza el derecho a la defensa y en la primera parte del art.
119.II, consagra la inviolabilidad de este derecho. Bajo ese criterio, el anterior Tribunal
Constitucional de Bolivia, a través de la SC 1156/2010-R de 27 de agosto, ha emitido el
siguiente entendimiento: “Dentro de ese contexto, surge a su vez como un presupuesto para la
operativización del derecho a la defensa dentro de cualquier proceso, que la persona contra la
que se dirija una demanda sea debida y legalmente informada de su existencia, pues de
desconocerla no podrá desvirtuar los extremos contenidos en ella, objetivo que se consigue
precisamente a través del instituto procesal de la citación. Este entendimiento ya se ha
plasmado en la jurisprudencia de este Tribunal, que de manera específica abordó este aspecto
en materia de hábeas corpus, determinando que la falta de citación a los demandados conlleva
la indefensión de éstos; y en consecuencia, corresponde anular obrados hasta el estado en que
puedan tomar conocimiento de la existencia de una acción tutelar formulada en su contra…”;
de cuyo entendimiento se concluye que, ante el incumplimiento de efectuar la citación en la
forma como establece la Constitución Política del Estado y la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional, es inminente la conculcación al derecho a la defensa, caso en que corresponde
anular obrados hasta reponer el acto ilegal cuestionado.

El mismo entendimiento encontramos en la SC 1153/2003-R de 15 de agosto, que señaló: “…el


art. 18.II de la Constitución Política del Estado (CPE) establece que la autoridad judicial que
conozca el hábeas corpus, 'señalará de inmediato día y hora de audiencia pública, disponiendo
que el actor sea conducido a su presencia. Con dicha orden se practicará citación personal o
por cédula en la oficina de la autoridad demandada...'.

(…) del precepto referido, se entiende que la citación es inexcusable y debe realizarse
indefectiblemente por el juzgador o tribunal que le corresponda conocer y resolver la acción
tutelar planteada, pues al ser un trámite sumarísimo y oral, la citación y asistencia de la parte
recurrida es vital para asumir criterio y resolver la tutela, salvo los casos en que la parte
recurrida renuncia a su derecho a asumir defensa, pues en éstos el juzgador deberá resolver en
base a las pruebas que aporte la parte recurrente, pero bajo ningún motivo se puede instalar
audiencia, celebrarla y resolver cuando la parte recurrida desconoce la presentación de la
acción tutelar en su contra.

(…) en la especie, no se ha cumplido con lo dispuesto por el artículo anterior, por cuanto dos de
los co-recurridos no fueron citados legalmente con el recurso y el auto de admisión como lo
ordenó el propio Tribunal del recurso, es más, existe un reconocimiento expreso de dicha
omisión por parte del oficial de diligencias de la Sala Penal Tercera de la Corte Superior que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1002
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fue puesta en conocimiento del Tribunal del recurso en audiencia, empero dicho Tribunal, en
lugar de resguardar el derecho a la defensa que implica el citado mandato fundamental,
prosiguió el trámite del recurso hasta dictar resolución resolviendo el recurso en el fondo,
cuando no podía hacerlo, pues los recurridos, no tuvieron oportunidad de desvirtuar la
denuncia del recurrente, ya que al haberse omitido su notificación se les impidió conocer la
demanda en su contra, situación que no puede ser tolerada y menos en un recurso como el
planteado”. La esencia en lo atinente a la citación con la acción de libertad no difiere; es decir,
la Constitución Política del Estado, al establecer la forma de citación en su forma personal o
mediante cédula, hace plenamente aplicable la jurisprudencia citada en líneas precedentes,
puesto que existe similitud en la Norma Fundamental vigente con la Constitución abrogada
respecto a la tramitación de esta acción.

III.2. Análisis del caso concreto

En el trámite de la presente acción de libertad, no se observó el procedimiento establecido al


efecto; es decir, se obró en franca infracción de lo estipulado por los arts. 126.I de la CPE y 68.2
de la LTCP, lo cual demuestra que la autoridad demandada no tuvo oportunidad para prestar su
informe, menos para alegar su versión de los hechos o asumir su defensa de manera oportuna,
frente a la acción interpuesta en su contra, lo que significa que dicha autoridad quedó en un
absoluto estado de indefensión, conculcándose de esta manera el derecho a la defensa que
constitucionalmente está garantizado.

Respecto a las citaciones con la acción o demanda de esta naturaleza, no es suficiente la simple
comunicación por cualquier otro medio, razón por la cual, el constituyente ha establecido
únicamente dos formas de citación como es personal o por cédula, cuya razón radica en que la
autoridad o persona demandada debe tomar conocimiento íntegro de la acción que se dirige
contra ella, a fin que tenga la oportunidad de informar o asumir su defensa en la medida de los
términos de la demanda; es decir, para desvirtuar con precisión las alegaciones de la acción en
su misma medida; por lo tanto, no son válidas las comunicaciones a la autoridad demandada que
no sean conforme o acorde con lo estipulado en la Norma Fundamental, debiendo las
autoridades conocedoras de la acción, sea juez o tribunal de garantías, velar por el estricto
cumplimiento en cuanto a las citaciones, sujetándose estrictamente a lo establecido en la
normativa vigente.

En el presente caso, ante la ausencia de una citación conforme establece la Constitución y la ley,
es necesario anular obrados hasta que se efectúe la misma a la Jueza de Instrucción Mixta de
Cabezas, sea personal o mediante cédula, puesto que no puede desconocerse el derecho a la
defensa que le asiste a la prenombrada autoridad como a cualquier otro ciudadano.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve: ANULAR obrados hasta la legal citación de la Jueza de Instrucción Mixta de Cabezas
con la presente acción de libertad, cumplido lo cual deberá celebrarse la audiencia y resolverse
la acción conforme corresponda en derecho.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1003
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0128/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00057-2012-01-AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución de 12 de “diciembre” de 2012, cursante de fs. 17 a 18 vta.,


pronunciada dentro de la acción de libertad interpuesta por Teodora Sonia Montero Rocha en
representación sin mandato de Ricky Beyuma Rojas, FF y JJ contra Humberto Padilla
Apaza, Juez del Trabajo, Seguridad Social, de la Niñez y Adolescencia; y María Jaqueline
Bascopé Gonzales, Fiscal de Frontera.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 9 de enero de 2012, cursante de fs. 1 a 3 vta., la accionante expone
los siguientes fundamentos de hecho y derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Sus representados fueron “objeto de transgresión” por parte del Ministerio Público, al estar
aprehendidos e indebidamente detenidos desde el 5 de enero de 2012. Así también, la
imputación formal contra Ricky Beyuma Rojas, fue notificada a la abogada defensora (hoy
accionante) el 9 del mismo mes y año a horas 10:30, situación que vulnera los derechos a la
libertad y al debido proceso, incumpliendo el Ministerio Público lo establecido en los arts. 97 y
226 del Código de Procedimiento Penal (CPP).

En audiencia de aplicación de medidas cautelares, la accionante en su condición de abogada


defensora, observó el incumplimiento de lo dispuesto por los arts. 234, 303 y 308 del Código del
Niño, Niña y Adolescente (CNNA); sin embargo, el Juez demandado, dejando de lado su rol de
contralor de garantías constitucionales, convalidó el acto cuestionado, vulnerando los derechos
al debido proceso, a la “seguridad jurídica” y sobre todo a la libertad de locomoción.

Aclara que a denuncia de sustracción de objetos, que luego fueron recuperados, sus
representados fueron privados de libertad, sin tramitar el mandamiento de aprehensión como
corresponde y, desde el 5 de enero de 2012, se mantuvo a los adolescentes “en qué calidad, no se
sabe” (sic), incumpliendo las disposiciones del Código del Niño, Niña y Adolescente y las
garantías de la Norma Fundamental, al estar aprehendidos más de cuarenta y ocho horas en
forma arbitraria.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1004


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La accionante estima lesionados los derechos de sus representados al debido proceso y a la


libertad, citando al efecto el art. 125 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

La accionante por sus representados, no hace una petición precisa respecto a la tutela
demandada.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 12 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 14
a 16, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La accionante por sus representados, en audiencia ratificó el memorial de demanda, señalando


que las declaraciones informativas fueron el 5 de enero de 2012, a horas 21:30, 22:30 y 23:30; y,
el arresto se produjo a las 15:00 del mismo día. Respecto a su representado Ricky Beyuma
Rojas, los antecedentes debieron remitirse al Juez de Instrucción en lo Penal en el plazo de
veinticuatro horas, ante su incumplimiento, se conculcó lo establecido por el art. 97 del CPP, al
haberse notificado con la imputación formal media hora antes de la audiencia de acción de
libertad. Respecto a FF y JJ, alegó que la Fiscal de Materia incumplió lo dispuesto por el art.
234 del CNNA, pues la aprehensión de los adolescentes debía tramitarse ante el Juez de la Niñez
y Adolescencia, autoridad que no observó los arts. 303 y 308 de dicha norma.

En uso de la réplica, refirió que el Código del Niño, Niña y Adolescente no contempla el arresto,
tampoco establece: “dar en custodia a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia”.

A su turno, el representado JJ, manifestó que fueron privados de libertad a las 12:00 del medio
día, circunstancia en que los efectivos policiales les apuntaron con armas, forzándoles a subir a
la patrulla para luego obligarles a que les llevaran al lugar donde se encontraban las “cosas”; una
vez que entregaron los objetos los llevaron a dependencias de la Fuerza Especial de Lucha
Contra el Crimen (FELCC).

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Delmy Guzmán Roda, Fiscal de Materia, invocando el principio de unidad del Ministerio
Público, manifestó: a) Los padres de los representados deberían concurrir a la audiencia, al no
haber perdido la autoridad paterna sobre ellos; b) A denuncia de la comisión del delito de robo,
hecho de connotación social, se efectuó la investigación contra los representados de la
accionante, cuyo resultado derivó en su arresto, con la aclaración de que en ningún momento
fueron aprehendidos, sólo arrestados, en estricta observancia del art. 4 del CNNA, presumiendo
en todo momento su minoridad, brindando todas las garantías, pues las actuaciones se realizaron
en presencia de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, incluso se creía que Ricky Beyuma
Rojas era menor de edad, constatándose luego que tenía diecisiete años; y, c) En ningún
momento fueron internados en celdas comunes, sino entregados a la Defensoría de la Niñez y
Adolescencia, pese a que los adolescentes son reincidentes, empero no es permisible registrar
sus antecedentes, al ser el Servicio Departamental de Gestión Social (SEDEGES) la única
institución que podía internarlos.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1005


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

María Jaqueline Bascopé Gonzales, Fiscal demandada, señaló: 1) Asumió conocimiento de la


causa debido a que se encontraba de turno, el día en que los representados fueron privados de
libertad, pasando el caso a la fiscal Delmy Guzmán Roda; 2) En la fecha del arresto, los
representados fueron encontrados en su domicilio junto a varios objetos, por ello los tres
adolescentes fueron tomados como menores infractores; sin embargo, en su declaración, Ricky
Beyuma Rojas señaló tener diecisiete años; 3) No era competente para disponer la aprehensión
de los adolescentes, máxime si no hubo flagrancia; 4) Ante la ausencia de sus padres, se
procedió a su entrega a la entidad protectora de los adolescentes; el 6 de enero de 2012, a horas
17:33, se informó el inicio de las investigaciones al Juez, pasando a su conocimiento la
imputación formal, efectuándose la audiencia de medidas cautelares, acto en que la autoridad
judicial estableció que el accionar del Ministerio Público era para precautelar a los menores; y,
5) Los adolescentes fueron remitidos en “custodia” a la Defensoría de la Niñez, por cuanto los
padres perdieron la autoridad sobre ellos.

El codemandado Humberto Padilla Apaza, Juez de la Niñez y Adolescencia, pese a su legal


citación (fs. 11), no asistió a la audiencia ni prestó informe escrito.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal, Administrativa, Coactiva Fiscal y Tributaria del Tribunal Departamental de


Justicia de Pando, constituida en Tribunal de garantías, dictó la Resolución de 12 de “diciembre”
de 2012, cursante de fs. 17 a 18 vta., por la que denegó la tutela, con los siguientes
fundamentos: i) Los antecedentes del cuaderno procesal evidencian que en el Juzgado Primero
de Instrucción en lo Penal, existe un proceso penal seguido por el Ministerio Público contra
Ricky Beyuma Rojas, por la comisión del delito de robo, instancia en la que se decidió la
situación jurídica de éste, disponiendo su detención preventiva; ii) En el Juzgado de la Niñez y
Adolescencia, cursan antecedentes respecto a FF y JJ, donde la autoridad judicial, mediante
Auto motivado dispuso la detención de los referidos infractores en instalaciones del SEDEGES,
determinación que no fue apelada, encontrándose bajo control jurisdiccional de autoridades
competentes, ante quien pueden acudir en caso de vulnerarse sus derechos, conforme al Código
de Procedimiento Penal y al Código del Niño, Niña y Adolescente; y, iii) En el caso en análisis,
existen medios de impugnación aptos y rápidos en la jurisdicción ordinaria, los cuales debieron
agotarse, de no prosperar, recién podía activarse la jurisdicción constitucional, conforme a las
SSCC 0035/2010-R y 0015/2010-R.

1.2.4. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Sorteada la causa el 15 de febrero de 2012, a través del AC 003/2012-CA/S de 22 de febrero, se


suspendió el plazo para su resolución por pedido de documentación complementaria a efectos de
un mejor proveer, reanudándose el cómputo correspondiente según decreto de 16 de abril del
mismo año; por lo que, la presente Sentencia se pronuncia dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:
II.1. Cursa en el legajo procesal “Actas de Arresto” de “Riqui” Beyuma Rojas, FF y JJ, donde se
establece que los indicados fueron privados de libertad a las 16:30 del 5 de enero de 2012 (fs.
59, 60 y 62).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1006


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. A fs. 57 cursa acta de entrega de menores, por el que se acredita que Ricky Beyuma Rojas,
FF y JJ, fueron remitidos a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia a horas 00:00 del 6 de
enero de 2012.

II.3. El 6 de enero de 2012, la Fiscal de Frontera demandada, informó al Juez de Instrucción en


lo Penal de turno, el inicio de la investigación contra Ricky Beyuma Rojas y otros (fs. 66 y vta.).
Similar informe remitió a la Jueza de la Niñez y Adolescencia, respecto a los menores JJ y FF
(fs. 68 vta.).

II.4. De fs. 70 a 71, cursa imputación formal contra JJ y FF por el presunto delito de robo,
presentada al Juez de la Niñez y Adolescencia el 7 de enero a horas 12:00, conforme consta en el
cargo de presentación.

II.5. De fs. 72 a 73 vta., consta la imputación formal contra Ricky Beyuma Rojas y otros, por el
presunto delito de robo, puesto en conocimiento del Juez de Instrucción en lo Penal de turno, el
7 de enero de 2012, conforme consta en el cargo de presentación cursante a fs. 72.

II.6. A fs. 149 y vta., cursa acta de audiencia de medidas cautelares de 9 de enero de 2012, de
los infractores JJ y FF, en el Juzgado de la Niñez y la Adolescencia, en la cual el Juez
demandado dispone su detención preventiva.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia que los adolescentes a quienes representa fueron indebidamente


aprehendidos y detenidos por la Fiscal de Frontera demandada, sin observar las normas
contenidas en el Código de Procedimiento Penal y el Código del Niño Niña y Adolescente. Por
otro lado, considera ilegal el accionar del Juez de la Niñez y Adolescencia codemandado, al
convalidar las actuaciones de la Fiscal, encontrándose sus representados detenidos hasta esa
fecha, sin tener certeza de su situación jurídica, indebidamente privados de libertad por más de
cuarenta y ocho horas. En consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son
evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad

La Constitución Política del Estado, incorpora en su texto la acción de libertad como una
garantía jurisdiccional de orden procesal, en resguardo y protección de los derechos a la vida, la
libertad física y de locomoción, instituto que en el derecho comparado es conocido como
“hábeas corpus”, cuyas bases están establecidas en los diferentes instrumentos normativos de
orden internacional como la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre,
Declaración Universal de Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, otros cuerpos normativos que conforman el bloque de constitucionalidad, conforme a
lo establecido por el art. 410 de la CPE. Como garantía jurisdiccional constituye un mecanismo
de defensa constitucional extraordinario que se caracteriza por ser preventivo, correctivo y
reparador de los derechos enunciados, cuando los mismos son afectados por detenciones,
persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o indebidos por parte de servidores
públicos o de personas particulares. Así, el art. 125 de la CPE, establece: “Toda persona que
considere que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente
procesada o privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de
manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante
cualquier juez o tribunal competente en materia penal, y, solicitará que se guarde tutela a su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1007


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

vida, cese la persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su


derecho a la libertad”.

III.2. La subsidiariedad excepcional de la acción de libertad en el caso de menores


infractores

La jurisprudencia establecida por el anterior Tribunal Constitucional, determinó que la acción de


libertad es excepcionalmente subsidiaria, al considerar que de acuerdo a los instrumentos
normativos internacionales, se debe garantizar la existencia de un recurso sumario, pronto y
eficaz, para que a través de éste se resuelvan sin demora las lesiones al derecho a la libertad;
medio que no necesariamente es la acción de libertad, pues el ordenamiento jurídico común
prevé mecanismos eficaces, prontos y oportunos para restituir dicha lesión, por ejemplo la
apelación incidental de medidas cautelares, recurso que debe ser utilizado previamente antes de
acudir a la justicia constitucional.

De persistir la lesión, no obstante haberse agotado las vías ordinarias, recién se activa la
jurisdicción constitucional a través de la acción de libertad. No obstante lo expresado, en los
casos cuya investigación involucre a menores infractores, la subsidiariedad excepcional de la
acción de libertad no es aplicable. En ese sentido, la SC 0018/2011-R de 7 de febrero,
recogiendo el entendimiento asumido por la SC 0818/2006-R de 21 de agosto, estableció: “…la
subsidiariedad con carácter excepcional del recurso de hábeas corpus, instituida en la SC
0160/2005-R, de 23 de febrero, cuando existen medios de defensa eficaces y oportunos para
resguardar el derecho a la libertad supuestamente lesionado, a los cuales el afectado deberá
acudir en forma previa y solamente agotados tales medios de defensa y ante la persistencia de
la lesión, se podrá acudir a la jurisdicción constitucional, invocando la tutela que brinda el
hábeas corpus, no es aplicable a los supuestos en los que menores de 16 años, considerados
menores infractores, se vean involucrados en la presunta comisión de delitos, por cuanto en
correspondencia con el régimen especial de protección y atención que el Estado y la sociedad
deben garantizar a todo niño, niña y adolescente, éstos se hallan bajo la protección y
regulación de las disposiciones del Código Niño, Niña y Adolescencia, cuyas normas son de
orden público y de aplicación preferente; que a diferencia de las normas previstas por el
Código de Procedimiento Penal, no existe un medio de impugnación expedito e inmediato
contra las resoluciones que restrinjan la libertad del menor detenido…”. Línea jurisprudencial
plenamente aplicable al caso en análisis, por cuanto la investigación efectuada por los órganos
encargados de la persecución penal involucra a adolescentes, cuya protección y tratamiento
están normados por el citado cuerpo normativo.

III.3. Naturaleza jurídica del arresto y aprehensión

Aunque no resulte ser un tema de estudio inherente a la problemática planteada; empero, con la
finalidad de tener mayor ilustración en el análisis del caso, es oportuno establecer los
lineamientos referentes al arresto y aprehensión dentro del ordenamiento jurídico procesal penal.
En ese marco, es de advertir que la norma adjetiva penal, dentro del acápite de las medidas
cautelares contempla ambos institutos (arresto y aprehensión), cuyas características comunes
consisten en una medida cautelar momentánea de privación de libertad en el desarrollo de la
investigación, ante la comisión de hechos ilícitos; sin embargo, ambas figuras procesales
difieren entre sí y tienen sus propias características y finalidades, que se desarrollan a
continuación:
El arresto, es una medida cautelar extrajudicial de carácter personal, consistente en la privación
de libertad del investigado por un tiempo breve y con un propósito específico, aplicable por el
fiscal o funcionarios policiales, conforme establece la aludida norma penal adjetiva. Así, el art.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1008
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

225 del CPP, señala: “Cuando en el primer momento de la investigación sea imposible
individualizar a los autores, participes y testigos y se deba proceder con urgencia para no
perjudicar la investigación, el fiscal o la policía podrán disponer que los presentes no se alejen
del lugar, no se comuniquen entre si antes de informar, ni se modifique el estado de las cosas y
de los lugares y, de ser necesario ordenaran el arresto de todos por un plazo no mayor de ocho
horas”. De la norma citada, se colige que la característica esencial del arresto radica en que es
provisional, con una duración máxima de ocho horas, con una finalidad esencialmente
investigativa, en ese sentido tiene un estrecho vínculo con los presupuestos materiales de
activación para la adopción de esta medida, a cuyo propósito el Tribunal Constitucional en la SC
0326/2003-R de 19 de marzo, señaló: “… el 'arresto' al no ser una medida judicial, es una
atribución del fiscal o la policía, pero a fin de evitar decisiones arbitrarias o no justificadas, es
que el art. 225 CPP, ha establecido los presupuestos materiales para la adopción de esa medida
que son, por una parte, la imposibilidad de individualización de los autores, partícipes y
testigos y, por otra parte, el riesgo de que puedan perjudicar la investigación; además la
privación de la libertad como consecuencia de un arresto, debe quedar condicionada a un
tiempo corto no mayor de ocho horas, es decir, que el máximo es precisamente las 8 horas”.

Entonces, conforme al entendimiento jurisprudencial anterior, el arresto tiene la única finalidad


de optimizar la investigación, cuando en el desarrollo de la misma, en un primer momento sea
imposible individualizar a los probables autores, cómplices o testigos, caso en que opera el
arresto, de lo contrario, ante la inconcurrencia de estos presupuestos la privación de libertad es
ilegal.

La aprehensión por su parte, igual que el arresto, es también una medida cautelar extrajudicial de
carácter personal, que puede ser impuesta por el funcionario policial, fiscal e inclusive por
particulares, conforme establecen los arts. 226, 227 y 229 del CPP. Para la aprehensión, la
autoridad o persona particular debe tener cierto grado de certeza y seguridad de la participación
del encausado en el ilícito investigado; cuya finalidad es, por una parte, asegurar su presencia
mientras dure la investigación y, por otra, ser remitido dentro las veinte cuatro horas ante el Juez
de Instrucción en lo Penal, autoridad llamada por ley para pronunciarse sobre la legalidad o
ilegalidad de la aprehensión en caso de cuestionarse la misma, quien además determinará la
situación jurídica del aprehendido. Para la procedencia de la aprehensión deben concurrir
necesariamente requisitos formales y materiales, aspecto desarrollado la jurisprudencia
constitucional en la SC 0957/2004-R de 17 de junio.

Los fundamentos expuestos precedentemente, son propios del procedimiento ordinario y común
que norma el compilado procesal penal, mismo que es inaplicable en procesos cuya
investigación involucre a adolescentes infractores, cuyo trámite debe ser regido por el Código
del Niño, Niña y Adolescente.

III.4. Aprehensión de adolescentes infractores

A continuación, corresponde hacer un análisis sobre la aprehensión de adolescentes infractores,


cuyo marco normativo es el Código del Niño, Niña y Adolescente, que en su art. 102, dispone:
“Ningún niño, niña o adolescente será internado, detenido ni citado de comparendo sin que la
medida sea dispuesta por el juez de la niñez y adolescencia y de acuerdo con lo dispuesto por el
presente Código”.

El art. 231 de la citada norma, señala: “La libertad del adolescente y todos los derechos y
garantías que le son reconocidos por la Constitución Política del Estado, por ese Código y otros
instrumentos internacionales, sólo podrán ser restringidos con carácter excepcional, cuando sean
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1009
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

absolutamente indispensables para la averiguación de la verdad, el desarrollo del proceso y la


aplicación de la ley.

Las medidas cautelares deberán ser dispuestas con carácter restrictivo, mediante resolución
judicial fundada y sólo durarán mientras subsista la necesidad de su aplicación, debiendo ser
ejecutadas de modo que perjudique lo menos posible a la persona y dignidad del adolescente”.

Por otra parte, el art. 234 del CNNA, establece: “El fiscal deberá tramitar ante el Juez de la
niñez y adolescencia la aprehensión del adolescente, al que se le imputa la comisión de un
delito cuando existan suficientes indicios de autoría o participación en un delito de acción
pública” (negrillas agregadas).

Respecto a la aprehensión policial, el art. 235 del CNNA, determina: “La Policía Nacional podrá
aprehender a un adolescente sólo en los siguientes casos:

1. En caso de fuga, estando legalmente detenido;

2. En caso de delito flagrante; y,

3. En cumplimiento de orden emanada por el Juez de la Niñez y Adolescencia.

En caso de los numerales 1 y 2 la autoridad policial que haya aprehendido a un adolescente,


deberá comunicar esta situación al Fiscal mediante informe circunstanciado en el término de
ocho horas y remitir inmediatamente al adolescente a un centro de detención preventiva;
asimismo, comunicar inmediatamente a sus padres o responsables...”.

La esencia de las normas citadas precedentemente, conllevan al entendimiento que la


aprehensión de menores infractores implicados en investigaciones por ilícitos de orden público,
encuentra su marco normativo en el Código del Niño, Niña y Adolescente. Bajo esa lógica, es
importante señalar que la autoridad competente para ordenar la aprehensión de adolescentes es
únicamente el juez de la niñez y adolescencia, a cuyo efecto la autoridad fiscal, por expreso
mandato de la citada norma, debe tramitar ante la autoridad judicial competente la orden de
aprehensión. Sin embargo, en sujeción a lo dispuesto por la norma supra citada, la Policía
Boliviana, está facultada para efectuar la aprehensión en los casos expresamente señalados por
el referido Código, que de acuerdo a su art. 304, luego de producida la aprehensión debe poner
en conocimiento del representante del Ministerio Público, quien comunicará a los padre o
responsables de los menores, pidiendo al personal que aprehendió informe circunstanciado de
los hechos. De considerarse necesaria la privación de libertad del menor, de acuerdo a lo
dispuesto por el art. 308 del CNNA, el fiscal solicitará al juez de la niñez y adolescencia la
ratificación de la aprehensión. Sin embargo, por mandato del art. 236 párrafo segundo del
CNNA, la autoridad fiscal al constatar la vulneración de los derechos del adolescente tiene la
facultad de disponer excepcionalmente la libertad.

Nótese que el Código del Niño, Niña y Adolescente, estatuye únicamente el instituto de la
aprehensión y no así el arresto, al ser este ultimo un mecanismo de investigación propio del
procedimiento común ordinario, regido por el Código de Procedimiento Penal, que no regula la
conducta de los menores y/o adolescentes infractores.

III.5. Análisis del caso concreto

De la revisión de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen los siguientes extremos:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1010
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.5.1. Sobre las actuaciones de la Fiscal de Frontera demandada

Dicha autoridad ingresó al inmueble donde se encontraban los menores JJ y FF, quienes -de
acuerdo a la versión de JJ- fueron privados de su libertad desde horas 12:00 del día 5 de enero de
2012, versión no desvirtuada ni rebatida por la autoridad demandada en audiencia de
consideración de la acción de libertad, por lo que se asume la veracidad de las afirmaciones de la
parte accionante.

Respecto a las actas manuscritas de arresto, no obstante de no estar firmadas por la autoridad
Fiscal, es incuestionable que ésta presenció y consintió dicho actuado. En todo momento, la
aludida autoridad alega que no dispuso la aprehensión de los menores, de lo contrario, admite
haber consentido o dispuesto el arresto de los adolescentes representados; sin embargo, al
remitirnos a las normas del Código del Niño, Niña y Adolescente, es indudable la inexistencia
de base legal alguna para disponer el arresto de menores infractores involucrados en una
investigación; máxime, si el arresto es un mecanismo propio del Código de Procedimiento
Penal. La Fiscal, al constatar que en el desarrollo de la investigación se encontraban
involucrados adolescentes infractores e imputables, cuya presencia o privación de libertad sea
indispensable, tenía el deber ineludible de cumplir las normas del citado cuerpo normativo; es
decir, tramitar la aprehensión ante el Juez de la Niñez y Adolescencia, cosa que no hizo.

En consecuencia, al no estar normado el arresto como mecanismo de investigación, o como


medida cautelar de carácter personal en el Código del Niño, Niña y Adolescente, de acuerdo al
desarrollo del Fundamento Jurídico III.3 de la presente Sentencia, la privación de libertad
efectuada por los funcionarios policiales y consentido este accionar por la autoridad Fiscal
demandada constituye una franca vulneración al derecho a la libertad, por aplicarse un
procedimiento distinto al establecido por la norma legal aplicable, principalmente cuando la
autoridad demandada después de recibir las declaraciones informativas de los adolescentes,
dispuso su remisión a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, accionar que no tiene base
legal.

III.5.2. Con relación al accionar del Juez de la Niñez y Adolescencia codemandado

Presentada la imputación formal ante dicha autoridad contra JJ y FF, la accionante en audiencia
pública cuestionó y denunció el accionar del Ministerio Publico; sin embargo, el Juez
demandado con fundamentos que se desconocen, convalidó los actos tachados de ilegales,
cuando conforme a las atribuciones del Juez de la Niñez y Adolescencia, normadas por el art.
269 del CNNA, compelen a dicha autoridad judicial velar por la plena vigencia de los derechos
individuales, del niño, niña o adolescente; por lo que, en su condición de Juez contralor de
derechos y garantías de los menores, debió hacer un análisis exhaustivo de los antecedentes del
proceso, en la medida en que dicha investigación no comprometa derechos cuya titularidad
descansa en los niños, niñas y adolescentes y de advertir vulneración de derechos en las
actuaciones policiales y del Ministerio Público, en ejercicio de su rol principal de velar por la
plena vigencia de los derechos fundamentales de los menores, debió declarar la ineficacia de
cuantas actuaciones sean violatorias de los derechos inherentes a los adolescentes, en busca de
una pronta restitución de esos derechos.

En consecuencia, la autoridad judicial demandada, al convalidar los actos ilegales de los


funcionarios policiales y del Ministerio Público, denunciados por la accionante, incurrió en
vulneración del derecho a la libertad y al debido proceso de los representados, por cuanto esta
autoridad se apartó de su rol principal cual era velar por la plena vigencia de los derechos de los
niños, niñas y adolescentes.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1011
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.5.3. Respecto al representado Ricky Beyuma Rojas

Se establece igualmente con meridiana claridad, que la investigación efectuada por el Ministerio
Publico en el presente caso se encuentra bajo el control del Juez Segundo de Instrucción en lo
Penal, autoridad que se constituye en contralor de los derechos y garantías constitucionales. En
ese sentido, corresponde traer a colación, la línea jurisprudencial sentada en la SC 0080/2010-R
de 3 de mayo, donde se estableció que: “…la acción de libertad, no puede ser desnaturalizada
en su esencia y finalidad, debiendo evitarse que se convierta en un medio alternativo o paralelo
que provoque confrontación jurídica con la jurisdicción ordinaria; por ello, y sin que implique
una restricción a sus alcances, ni desconocimiento al principio de favorabilidad, sino para que
no pierda su esencia misma de ser un recurso heroico, se ha establecido que en los casos, que
en materia penal se impugnen actuaciones no judiciales -antes de la imputación formal- y
judiciales -posteriores a la imputación-, a través de la acción de libertad, hay aspectos que se
deben tener en cuenta, en los cuales de manera excepcional, no es posible ingresar al fondo de
la acción de libertad, a objeto de guardar el equilibrio y complementariedad entre ambas
jurisdicciones, en los siguientes supuestos:

Primer supuesto:

Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía cometieron


arbitrariedades relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía no existe
aviso del inicio de la investigación, corresponde ser denunciadas ante el Juez Cautelar de
turno. En los casos en los que ya se cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el
aviso del inicio de la investigación, al estar identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella
donde se debe acudir en procura de la reparación y/o protección a sus derechos. De no ser así,
se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la finalidad que el soberano a través del
legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como juez constitucional en el control
de la investigación”

Siguiendo el entendimiento jurisprudencial anterior, dicho representado debió acudir ante el


Juez cautelar bajo cuyo control judicial se encuentra la investigación, a los efectos de denunciar
los supuestos actos ilegales restrictivos de sus derechos invocados, a efectos de la tutela de los
mismos a través de los mecanismos ordinarios previstos en el Código de Procedimiento Penal,
por lo que respecto del indicado, se debe denegar la tutela solicitada.

III.6. De los plazos en la tramitación de la acción de libertad

Conforme a lo establecido en el art. 125.I de la CPE y 68.1 de la Ley del Tribunal


Constitucional Plurinacional (LTCP), presentada la acción de libertad, la autoridad judicial debe
señalar de inmediato día y hora de audiencia para su consideración, la que tendrá lugar dentro de
las veinticuatro horas siguientes. Por su parte, la misma Norma Fundamental en su art. 126.IV y
el art. 64 de la LTCP, señalan que la resolución del tribunal de garantías debe ser remitida al
Tribunal Constitucional Plurinacional en consulta dentro del plazo de veinticuatro horas.

De la revisión de los antecedentes del cuaderno procesal se tiene que la acción de libertad fue
presentada al Tribunal de garantías el 9 de enero de 2012 a horas 18:15. En el curso de su
tramitación, el Auto de admisión fue dictado recién el 11 del mismo mes y año y sin argumento
legal alguno el Tribunal de garantías señaló audiencia para el 12 del señalado mes y año, a horas
10:00, cuando dicha audiencia debió tener lugar dentro de las veinticuatro horas de interpuesta la
acción.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1012


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Efectuada la audiencia en la fecha señalada, la Resolución del Tribunal de garantías fue remitida
a este Tribunal el 31 de enero de 2012; es decir, pasados diecinueve días de efectuada la
audiencia.

De lo advertido precedentemente, se tiene que el Tribunal de garantías, incurrió en una franca


vulneración de la Constitución Política del Estado y la Ley Tribunal Constitucional
Plurinacional, al inobservar flagrantemente los plazos establecidos para la sustanciación de la
acción de libertad.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al denegar la tutela solicitada respecto a todos los


representados de la accionante, efectuó una compulsa parcial de los antecedentes y alcances de
esta acción.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve:

1° APROBAR en parte y con los fundamentos precedentes, la Resolución de 12 de


“diciembre” de 2012, cursante de fs. 17 a 18 vta., dictada por la Sala Penal Administrativa
Coactiva Fiscal y Tributaria del Tribunal Departamental de Justicia de Pando; en consecuencia,
DENEGAR la tutela solicitada por la accionante en representación de Ricky Beyuma Rojas.

2° REVOCAR en parte la referida Resolución de 12 de “diciembre” de 2012, pronunciada por


el Tribunal de garantías; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada por la accionante
en representación de los adolescentes JJ y FF, sin disponer su libertad, por estar ambos bajo la
tuición de una autoridad llamada por ley.

3° Llamar la atención al Tribunal de garantías, por no haber observado estrictamente lo


dispuesto por los arts. 125.I y 126.IV de la CPE; y 64 y 68.1 de la LTCP, en cuanto a los plazos
para la sustanciación de la presente acción.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1013


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0129/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de libertad
Expediente: 00137-2012-01-AL
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 14 de enero de 2012, cursante de fs. 55 a 58 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Luis Orlando Camacho Siles en representación
de los menores AA y BB contra María Cecilia Prada Rosas.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 13 de enero de 2012, cursante de fs. 33 a 37, el accionante expone
los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso de divorcio que instauró contra María Cecilia Prada Rosas, la Jueza Primera
de Partido de Familia, a través de la Resolución de 16 de abril de 2009 -en su inc. b)- le
concedió la guarda de sus hijos AA y BB; fecha a partir de la cual, ejerció su cuidado
responsable y sin problema alguno, cumpliendo además la posterior Resolución de 28 de abril
de 2011, que modificó un anterior régimen de visitas de la demandada, estableciéndose que
recogería a los niños los sábados -a horas 9:00- del domicilio de Luis Orlando Camacho Siles,
debiendo devolverlos a dicha residencia a las 19:00 del mismo día, bajo términos de respeto
mutuo y “conminatoria de ley”.

El pasado 7 de enero de 2012, preocupado porque hasta las 19:45 horas de ese día sus hijos no
retornaban a su hogar, intentó comunicarse con María Cecilia Prada Rosas, quien atendió su
celular por única vez, luego de mucha insistencia, indicando que no le entregaría a los menores;
del mismo modo, uno de ellos contestó su teléfono móvil manifestando que su madre no quería
devolverlos a casa y que se encontrarían en “la Tadeo Ahenke” (sic), dirección a la que se
constituyó inmediatamente, sin encontrar a nadie. Debido a que tanto la nombrada como sus
hijos tenían apagados sus celulares, acudió a la Brigada de Protección a la Familia para formular
la denuncia respectiva, cuyos funcionarios constataron la imposibilidad de comunicarse con los
indicados, recurriendo a llamar a la madre de la denunciada quien dijo desconocer el tema y que
pese a no haber tenido contacto con su hija, sabía que se iría de viaje. Luego, constituidos en el
domicilio de la “Tadeo Ahenke”, constataron por una vecina que nadie vivía allí, registrándose
estas actuaciones en el formulario 1 de la Brigada y 3 de informe de acción directa policial. Al
permanecer inmutables estas circunstancias hasta el día siguiente, a través de una funcionaria
policial se comunicaron “al Paso” (sic) con el hermano de María Cecilia Prada Rosas, quien
indicó no saber nada y que la requerida no vivía allí hace tres meses.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1014


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El lunes 9 de enero de 2012, apersonados nuevamente al domicilio de la “Tadeo Ahenke” para


citar a la denunciada a dependencias de la Brigada, los inquilinos de la residencia aseveraron
que la demandada no vivía allí; motivo por el cual acudió a la Defensoría de la Niñez y
Adolescencia para denunciar todo lo ya referido, instancia que también corroboró que María
Cecilia Prada Rosas ya no reside en la dirección antes indicada, como tampoco en su inmueble
de la zona de Alto Temporal, tal como certificó un “personero” de la Defensoría. Ambas
instituciones, no pudieron dar con el paradero de sus hijos menores de edad, quienes se
encuentran desaparecidos, incomunicados y restringidos de su libertad por actuación de la
madre, que se esconde dolosamente.

Aclara que, si bien dentro del proceso de divorcio se declaró improbada la demanda y sin efecto
las medidas provisionales, esta Resolución no hace referencia a la guarda de sus hijos, que se
mantendría subsistente a su favor mientras no cobre ejecutoria; a más que fue objeto de
apelación, precisamente sobre la ratificación de lo decidido a través de la Resolución de “28 de
abril de 2011”. Así, corresponde tomar en cuenta además que AA y BB, forman junto a su padre
un entorno familiar con el que ya están emocionalmente acostumbrados y corre el riesgo de
privárseles, por cuanto tomó conocimiento que la hermana de María Cecilia Prada Rosas, intentó
obtener autorización de viaje para los menores en la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de la
Terminal de Buses, estando latente la posibilidad que sean sacados del país hacia la República
del Brasil, donde la demandada tiene tíos y primos establecidos; razón por la que, solicita al
Tribunal de garantías se haga conocer de esta acción de defensa al asistente legal “ARIEL” (sic)
de la referida Defensoría, como también a su similar de la Comuna Molle, con la finalidad que
ambas instituciones a través de sus abogados informen respecto al paradero de los menores y
sobre la intención de procurar su viaje fuera del departamento de Cochabamba; asimismo, se
participe a la Jueza Segunda de Partido de Familia, para que brinde declaración respecto a las
acciones que asumió luego que se denunciara la desaparición de AA y BB, remitiendo el
expediente original a objeto de verificar los antecedentes expuestos.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, estima lesionados los derechos de los menores AA y BB a la libertad, a la


“locomoción”, al libre tránsito, a la circulación, a la integridad física y psicológica, a la familia
de origen, al debido proceso -por retención arbitraria sin orden judicial-, a la comunicación y a
la libertad de opinión y de expresión, citando al efecto únicamente los arts. 22 y 23.I y III de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Con esos antecedentes, solicita se restituya la libertad de los dos menores, sean conducidos ante
el Tribunal de garantías y que la Defensoría de la Niñez y Adolescencia elabore las evaluaciones
e investigaciones correspondientes.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública de 14 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 51
a 54 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó el tenor íntegro de la demanda y ampliando, afirmó: a) La


determinación asumida por la Jueza Segunda de Partido de Familia, respecto a la guarda de AA
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1015
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

y BB, se sustentó legalmente en los arts. 389 y 145 del Código de Familia (CF), por lo que toda
retención de los hijos de su defendido, más allá del tiempo establecido para el horario de visitas,
comprende una indebida privación del derecho a la libertad de los menores; b) No obstante que
Luis Orlando Camacho Siles puso a conocimiento la desaparición de sus hijos ante la Jueza de la
causa, esta autoridad no asumió las medidas necesarias para restituir a los menores a la guarda
de su padre, quienes llevan una semana de desaparecidos, obviándose con ello el mandato
constitucional contenido en el art. 60 de la CPE, que exhorta al Estado a velar por el interés
superior del niño y adolescente, además de la primacía para recibir socorro y protección bajo
cualquier circunstancia, accediendo a una justicia pronta y oportuna; aspectos que condicen con
los arts. 108 y 158 del Código del Niño, Niña y Adolescente (CNNA); y, c) La particular
demandada incurrió en la comisión del delito tipificado en el art. 246 del Código Penal (CP) y
en la figura prevista en el art. “392 del CP” (sic), por lo que corresponde al Tribunal de
garantías, remitir antecedentes al Ministerio Público, a objeto que se investigue lo denunciado.

En ejercicio de su derecho a la réplica, el abogado del accionante agregó que si bien a través de
la Sentencia “de 22 de diciembre de 2011”, se dejaron sin efecto las medidas provisionales
adoptadas en el proceso de divorcio, esta situación todavía no se consolidó al estar pendiente el
recurso de apelación interpuesto contra el fallo de primera instancia, manteniéndose subsistente
la guarda provisional otorgada a favor de su defendido.

I.2.2. Informe de la particular demandada

María Cecilia Prada Rosas, no asistió a la audiencia de acción de libertad y tampoco prestó
informe escrito, a pesar de su citación cedularia practicada en su domicilio real, según cursa a fs.
41 vta. Sin embargo, luego de concluido el acto procesal y antes que se pronunciara Resolución,
se hizo presente su abogada patrocinante en el proceso de divorcio, quien manifestó que su
defendida no secuestró a los menores; más bien, puso a conocimiento de la Jueza Segunda de
Partido de Familia, un memorial en el que afirma la negativa de los niños para regresar junto a
su padre, mismo que se ordenó correr en traslado al ahora accionante, quien aún no fue
notificado con el decreto. Aclaró que la Sentencia de primera instancia dictada en el proceso de
divorcio, se pronunció dejando sin efecto las medidas provisionales dispuestas y por otro lado,
se nombró tutora de los menores a su abuela materna, a consecuencia del comportamiento de
ambos progenitores.

I.2.3. Intervención de los representantes de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia

El abogado de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia de la Comuna Molle, corroboró los


hechos expuestos por el accionante, afirmando que el 9 de enero de 2012, recibió la denuncia de
Luis Orlando Camacho Siles contra María Cecilia Prada Rosas, por guarda indebida, tenencia
ilegal y utilización de menor en conflictos familiares, constatando que la denunciada no se
encontraba en las direcciones en que fue buscada, tal como se detalla en el memorial de acción
de libertad.

Por su parte, el responsable de Autorización de Viaje de Menores de Edad de la Defensoría de la


Niñez y Adolescencia, indicó que el 12 de enero del mismo año, una señora se aproximó a esa
oficina a objeto de recabar únicamente los requisitos para dicha autorización, afirmando que una
familiar suya tenía un conflicto sobre guarda de sus hijos, a tiempo que exhibió la Sentencia de
divorcio del proceso seguido por el accionante contra María Cecilia Prada Rosas.

I.2.4. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1016


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba, constituido en


Tribunal de garantías, dictó la Resolución de 14 de enero de 2012, cursante de fs. 55 a 58 vta.,
por la que concedió en parte la tutela, disponiendo que la demandada restituya en el día a los
menores a la guarda de su padre; decisión que se asumió bajo los siguientes fundamentos: i) De
acuerdo a la SC 2235/2010-R de 19 de noviembre, en los casos que esté comprometido el interés
superior del niño, no es posible dar observancia al principio de subsidiariedad al que se rige
excepcionalmente la acción de libertad, situación que admite ingresar al análisis de fondo de la
problemática planteada; ii) En ese orden se advierte que, dentro del proceso de divorcio
demandado por el accionante, se pronunció la Sentencia 128/2011 de 22 de diciembre,
declarando improbada la misma y manteniendo vigente el lazo conyugal entre Luis Orlando
Camacho Siles y María Cecilia Prada Rosas, en consecuencia, dejando sin efecto las medidas
provisionales adoptadas. Sin embargo, de esta Resolución, el impetrante opuso recurso de
apelación del que no consta la conclusión de su trámite, circunstancia que permite inferir que el
fallo de primera instancia no cobró ejecutoria, manteniéndose subsistentes las medidas
provisionales, entre ellas, la tenencia de los menores a favor de su progenitor; iii) Por memorial
de 9 de enero de 2012, María Cecilia Prada Rosas se apersonó ante la Jueza de la causa, afirmando
que -en cumplimiento del régimen de visitas- al finalizar la tarde del 7 de ese mes y año, se
comunicó con el padre de AA y BB, para “decirle” que sus hijos querían quedarse con ella el fin
de semana; situación que provocó la “furibunda” reacción del hoy accionante, que desencadenó
en el llanto y susto de los niños. Sobre la base de estos antecedentes, la demandada solicitó se
autorice la permanencia de sus hijos con ella durante la vacación, comprometiéndose a que el
actor pueda verlos cuando así lo desee; a este respecto, la Juzgadora decretó traslado a la otra
parte para su pronunciamiento; iv) De lo referido, destaca por un lado la obligatoriedad de la
demandada en dar cumplimiento a los términos de la visita, tomando en cuenta que la guarda fue
confiada al accionante en el proceso de divorcio y no hubo otra disposición en contrario,
conforme prevé el art. 42 del CNNA; y por otro, del tenor del mencionado memorial, se advierte
una virtual confesión de haber faltado con este compromiso; v) De allí que, la demandada actuó
contra lo dispuesto en una resolución judicial expresa, cometiendo el acto ilegal de retención
indebida e incomunicación de sus hijos menores de edad -cuya guarda fue concedida
judicialmente al progenitor- y respecto a quienes se limitó el ejercicio de sus derechos a la
libertad personal y de locomoción; situación que, de acuerdo al art. 108 del CNNA, constituye
maltrato y vulnera el contenido del art. 61 de la CPE; y, vi) Por lo expuesto, resulta necesaria y
pertinente la concesión de la tutela únicamente respecto a la restitución de los derechos de los
menores, más no así sobre la remisión de antecedentes al Ministerio Público, por constar la
denuncia del accionante en instancias policiales, de la que derivará la investigación y si
correspondiere, la instauración de un proceso penal.

En la vía de la complementación y enmienda, el Tribunal de garantías dispuso la notificación de


la demandada “en el domicilio que se tiene expresado en la demanda” (sic) y de la Dirección
Departamental de Migración, a objeto que instruya el conocimiento de la Resolución antes
descrita a los puestos de control carretero, aeropuertos, puestos fronterizos y terminal de buses,
de modo que no se permita el viaje de los menores AA y BB.

Del mismo modo, en atención a la solicitud de la demandada (67 a 68 vta.), el Tribunal de


garantías aclaró la Resolución de 14 de enero de 2012, ratificando los términos de los incisos iii)
y iv) detallados en el párrafo inicial del punto I.2.4 de esta Sentencia, además de reafirmar por
un lado, la ilegalidad en la que incurrió la madre al obviar el cumplimiento del régimen de
visitas que debía acatar y, por otro, indicar que la notificación a los puestos de control carretero,
aeropuertos, puestos fronterizos y terminal de buses, se traduce en una medida de seguridad para
el cumplimiento de lo dispuesto en sede constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1017


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. CONCLUSIONES

De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo


siguiente:

II.1. A través de la Resolución de 16 de abril de 2009, cursante a fs. 7 vta., la Jueza Primera de
Partido de Familia, admitió la demanda de divorcio interpuesta por Luis Orlando Camacho Siles
contra María Cecilia Prada Rosas (fs. 5 a 7 vta.), determinando como medidas provisionales la
separación de cuerpos y concediendo la guarda de los menores AA y BB a favor del
demandante.

II.2. Consta en el acta de audiencia de conciliación de ampliación de derecho de visita,


celebrada el 28 de abril de 2011, dentro del referido proceso de divorcio, que se modificó el
derecho ejercido por la madre de visita a los menores AA y BB, los días sábado a partir de horas
9:00 hasta las 19:00, debiendo recogerlos y devolverlos en el domicilio del progenitor en el
horario respectivo.

Régimen a cumplirse bajo conminatoria de ley y dentro del marco del respeto mutuo entre
padres, priorizando el interés superior de sus hijos, con la aclaración que cualquier impedimento
en su cumplimiento debe comunicarse con antelación, como también, el cambio de lo
establecido previo acuerdo y coordinación de ambos progenitores (fs. 9).

II.3. De fs. 18 a 21 vta., cursa la Sentencia 128/2011 de 22 de diciembre, por la que se declaró
improbada la demanda de divorcio (Conclusión II.1), manteniéndose el vínculo conyugal entre
Luis Orlando Camacho Siles y María Cecilia Prada Rosas, en consecuencia “sin efecto las
medidas provisionales adoptadas en el presente proceso. 2) en relación a la demanda incidental
de guarda de los menores, planteada por la demandada, habiéndose declarado improbada la
demanda principal y (…) sin efecto todas las medidas provisionales (…) siendo la situación de
los hijos parte accesoria al proceso de divorcio, resulta innecesario entrar a considerar en el
fondo, por lo que no se toma ninguna determinación” (sic).

II.4. Contra la Sentencia 128/2011, descrita en la Conclusión anterior, el demandante opuso


recurso de apelación del que no consta cargo de recepción (fs. 22 a 30), pero fue proveído y
dispuesto su traslado a contra parte según Resolución de 10 de enero de 2012, cursante a fs. 31.

II.5. De los formularios 1 -Denuncia- (fs. 12 a 13), 2 -Declaraciones- (fs. 14) y 3 -Informe de
Acción Directa- (fs. 15), todos de 7 de enero de 2012 y dentro del caso signado 0052/12, se
constata que el accionante acudió a dependencias de la Brigada de Protección a la Familia, a
objeto de poner a conocimiento de esta institución, la desaparición de sus hijos AA y BB,
conforme a los antecedentes que condicen con el memorial de interposición de la presente
acción de defensa.

II.6. Según certificación que cursa a fs. 16, el abogado de la Defensoría de la Niñez y
Adolescencia de la Comuna Molle, ratifica que el 9 de enero de 2012, Luis Orlando Camacho
Siles formuló denuncia contra María Cecilia Prada Rosas, por guarda indebida, tenencia ilegal y
utilización de menores en conflictos familiares, extendiéndose citación para la denunciada. Sin
embargo, apersonados en el domicilio ubicado en la av. Tadeo “Ahenke No.- 2465” (sic), se
constató -por información del inquilino- que la requerida ya no vivía allí (fs. 17); situación que
se reiteró en otra residencia de la demandada, en la zona de “Temporal”. Concluye la
certificación, en informar que la “señora Prada” junto a sus dos hijos, se encuentra con domicilio
desconocido.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1018
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.7. Por memoriales de 19 y 25 de enero y de 6 y 10 de febrero de 2012 (fs. 71 y vta.; 88 a 89


vta.; 92 y vta.; y 95 y vta.), el accionante denunció ante el Tribunal de garantías el
incumplimiento de la Resolución de 14 de enero de igual año por parte de María Cecilia Prada
Rosas, solicitando su ejecución forzosa y la remisión de antecedentes al Ministerio Público.

II.8. Ante este Tribunal, María Cecilia Prada Rosas, el 16 de marzo de 2012, presentó el
memorial que cursa de fs. 107 a 111 vta., apersonándose y pidiendo que se considere que los
menores AA y BB se rehúsan a volver con su padre, que el proceso de divorcio se encuentra en
casación y que hubiera una “sentencia” dictada por un “juez de la niñez y adolescencia” por la
que se hubiera conferido la guarda de sus hijos a favor de su abuela materna; por lo que solicitó
se deniegue la tutela impetrada por el accionante.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante denuncia que los menores AA y BB se encuentran desaparecidos, privados de su


derecho a la libertad e incomunicados, por la dolosa actitud de su madre -contra quien dirige la
presente acción- que incumplió el régimen de visita establecido a través de la Resolución de 28
de noviembre de 2011; por cuanto no obstante que le correspondía devolver a los menores al
domicilio del accionante a las 19:00 del día sábado 7 de enero de 2012, los retuvo
indebidamente, con la aparente intención de sacarlos del departamento de Cochabamba e
inclusive del país. Aclara que, tras apelar la Sentencia por la que se declaró improbada la
demanda de divorcio que interpuso, se mantenía subsistente la medida provisional de guarda
concedida a favor del accionante, por lo que la Resolución impugnada no cobró ejecutoria. En
consecuencia, corresponde en revisión, verificar si tales extremos son evidentes, a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad

La acción de libertad constituye una acción de defensa, cuyo objetivo consiste en proteger el
derecho a la libertad personal física y de locomoción, ampliando su ámbito de tutela inclusive a
la vida, conforme se extrae del art. 125 de la CPE, que dispone: “Toda persona que considere
que su vida está en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o
privada de libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o
escrita, por sí o por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier
juez o tribunal competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la
persecución indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la
libertad”.

En derivación del artículo citado, se infiere el triple carácter tutelar de esta garantía
constitucional: preventivo, correctivo y reparador, reforzando su calidad de acción de defensa
oportuna y eficaz, que tiene por finalidad el resguardo y protección de los derechos a la vida y la
libertad -tanto física como de locomoción-. En ese marco, su carácter preventivo responde a
impedir una lesión ante la amenaza de una eventual vulneración del derecho a la vida y/o a la
libertad física o de locomoción; el carácter correctivo, tiene por objeto evitar se agraven las
condiciones de una persona detenida, ya sea en virtud de una medida cautelar o en cumplimiento
de una pena impuesta en su contra; finalmente, el carácter reparador, procura subsanar una
lesión ya consumada, es decir, opera ante la verificación de una detención ilegal o indebida,
debido a que no se observaron las formalidades legales.

La construcción de la acción de libertad sobre la base de su naturaleza procesal y los


presupuestos para su activación, suponen por una parte, una tramitación especial y sumarísima,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1019
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

en procura de materializar la inmediatez en urgencia de la protección de los derechos que tutela,


en observancia de los principios de inmediación, generalidad e informalismo; y por otra, la
factibilidad de activar la justicia constitucional, ante la amenaza o vulneración consumada de los
derechos a la vida, a la libertad física y de locomoción, incluyéndose los casos de acciones u
omisiones que configuren procesamiento indebido y persecución indebida.

III.1.1. Alcances de su tutela

De lo anterior, resulta que la acción de libertad se constituye en una garantía jurisdiccional


esencial, que amplía los alcances de su tutela hacia el derecho a la vida -bien jurídico primario y
fuente de los demás derechos del ser humano- junto al comúnmente protegido por esta garantía,
que es el derecho a la libertad física o personal, además de la garantía del debido proceso -en los
supuestos en que exista vinculación directa con el derecho a la libertad física y absoluto estado
de indefensión- y el derecho a la libertad de locomoción, cuando se vincule con la libertad física
o personal.

En mérito a ello, la Constitución Política del Estado vigente, acorde al principio de


progresividad, acentúa algunas de las características de esta acción de defensa, en lo que
respecta al informalismo, al posibilitar su presentación oral, antes reservada sólo a los supuestos
en que la persona fuera menor de edad, incapacitada, analfabeta o notoriamente pobre; enfatiza
el principio de inmediación, al establecer que el juez o tribunal de garantías, acuda al lugar de
detención del agraviado, además de estar facultado a disponer que éste sea conducido a su
presencia; asimismo, -se reitera-, amplía su ámbito de protección al derecho a la vida; y,
finalmente, preceptúa que esta garantía pueda dirigirse contra particulares, en resguardo de los
bienes jurídicos que tutela (art. 126 de la CPE).

En ese orden, la jurisprudencia constitucional precisó las condiciones en las que es viable
acceder a la tutela otorgada a través de esta garantía, bajo las circunstancias siguientes: “…a)
Cuando considere que su vida está en peligro; b) Que es ilegalmente perseguida; c) Que es
indebidamente procesada; y, d) o 'privada de libertad personal” (SSCC 0451/2010-R,
1243/2011-R, 1297/2011-R, 1740/2011-R, entre muchas otras). Supuestos que guardan
coherencia con el aludido precepto constitucional, respecto a la solicitud de restitución de la
libertad restringida, que supone -necesariamente- una limitación vigente de este derecho;
afirmación que se sujeta en la finalidad de este medio extraordinario de resguardo y protección
inmediata de la vida, de la libertad física y de locomoción, como también contra una efectiva
lesión de estos derechos a causa de una persecución ilegal o a consecuencia de un indebido
procesamiento o restricción de libertad.

III.2. El principio general de interés superior del niño o niña y el principio ético-moral de
suma qamaña

A través de la Ley 1152 de 14 de mayo de 1990, Bolivia ratificó la Convención Sobre los
Derechos del Niño, promulgada por la Organización de las Naciones Unidas en noviembre de
1989, instrumento jurídico internacional de radical importancia en lo que respecta a la
protección integral de los derechos de la niñez a la subsistencia, que implica un reconocimiento
de niveles de vida adecuados y acceso a los servicios básicos; al desarrollo, por el que los niños
deben desarrollarse de manera armoniosa, con respeto, afecto y dignidad, desenvolviéndose
en todos los ámbitos como la educación, el juego, actividades culturales, la libertad de
pensamiento, de conciencia y de religión; a la protección, que comprende la tutela contra las
formas de explotación y crueldad y la separación arbitraria de la familia; y, por último, el
derecho a la participación, que promueve la libertad de expresar opiniones y manifestarse
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1020
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

respecto a cuestiones que afectan su propia vida, lo que significa que ningún proceso pueda
desarrollarse sin escuchar la opinión del niño (Sandra de Kolle, Carlos Tiffer, Justicia Juvenil en
Bolivia).

A más de lo anterior, la Convención sobre los Derechos del Niño, asume varios principios a
observarse en la protección de los derechos de la niñez, entre ellos, el de interés superior (art. 3),
como eje transversal de todas las decisiones a adoptarse por instituciones públicas o privadas, en
sentido que sus derechos prevalecen sobre los demás, favoreciendo su desarrollo físico,
psicológico, moral y social; el de unidad familiar, por el que se reconoce a la familia como el
medio ideal para el desarrollo del niño y la niña, de donde surge la obligación del Estado de
prestar la asistencia a los padres para que éstos cumplan sus responsabilidades en la educación
integral del menor; y, el de autonomía progresiva en el ejercicio de todos sus derechos,
consiguiendo superar el criterio dominante referido a que los padres tienen poder sobre sus hijos
al carecer éstos de autonomía, para entender que los progenitores sólo tienen la función de
orientarlos y dirigirlos en forma apropiada para que ejerzan sus derechos, según indica el art. 5
de la referida Convención (en ese sentido, la SC 0735/2010-R de 26 de julio).

Con la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño, los Estados parte iniciaron un
proceso de adecuación de su legislación a la luz de la doctrina de la protección integral de los
niños, considerándolos como sujetos plenos de derechos y dejando atrás la concepción de sujeto
pasivo de medidas de protección. En ese marco normativo internacional, la Constitución Política
del Estado vigente incluyó en su primera parte, Titulo II -relativo a los derechos fundamentales
y garantías-, Capítulo Quinto, Sección V, el reconocimiento específico de los derechos de la
niñez, adolescencia y juventud, cuyos arts. 58 y 60, respectivamente, identifican a los titulares
de su ejercicio, señalando que: "Se considera niña, niño o adolescente a toda persona menor de
edad. Las niñas, niños y adolescentes son titulares de los derechos reconocidos en la
Constitución, con los límites establecidos en ésta, y de los derechos específicos inherentes a su
proceso de desarrollo; a su identidad étnica, sociocultural, de género y generacional; y a la
satisfacción de sus necesidades, intereses y aspiraciones"; para consagrar posteriormente, el
principio de interés superior del derecho del menor, al disponer: "Es deber del Estado, la
sociedad y la familia garantizar la prioridad del interés superior de la niña, niño y adolescente,
que comprende la preeminencia de sus derechos, la primacía en recibir protección y socorro en
cualquier circunstancia, la prioridad en la atención de los servicios públicos y privados, y el
acceso a una administración de justicia pronta, oportuna y con asistencia de personal
especializado".

De ese modo, la Norma Fundamental recoge el criterio de protección integral de la niñez, que
asumió el Código Niño, Niña y Adolescente -Ley 2026 de 27 de octubre de 1999-, con la
ratificación de la ya referida Convención, considerando a los niños y adolescentes como titulares
de todos los derechos que pueden ser ejercidos directamente de acuerdo a su edad y desarrollo.
El Código aludido, a su vez, informa su contenido en el reconocimiento de los principios de no
discriminación (art. 3), de interés superior (arts. 6 y 7), de unidad familiar (art. 27 y ss.) y de
autonomía progresiva, entre otros.

Así es que el interés superior del niño cumple un papel regulador de la normativa de los
derechos del niño y se funda básicamente en la dignidad del ser humano, las características de
los niños y la necesidad de procurar su desarrollo integral. En ese orden, el artículo 2 de la
Declaración de los Derechos del Niño, reconoce que: “El niño gozará de una protección especial
y dispondrá de oportunidades y servicios, dispensado todo ello por la ley y por otros medios,
para que pueda desarrollarse física, mental, moral, espiritual y socialmente en forma saludable y
normal, así como en condiciones de libertad y dignidad. Al promulgar leyes con este fin, la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1021
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

consideración fundamental a que se atenderá será el interés superior del niño”; para luego
enfatizar este principio en el artículo posterior, indicando que “1. En todas las medidas
concernientes a los niños que tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los
tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, una consideración
primordial a que se atenderá será el interés superior del niño”.

“En el mismo sentido, conviene observar que para asegurar, en la mayor medida posible, la
prevalencia del interés superior del niño, el preámbulo de la Convención sobre los Derechos
del Niño establece que éste requiere 'cuidados especiales', y el artículo 19 de la Convención
Americana señala que debe recibir 'medidas especiales de protección'. En ambos casos, la
necesidad de adoptar esas medidas o cuidados proviene de la situación específica en la que se
encuentran los niños, tomando en cuenta su debilidad, inmadurez o inexperiencia” (Opinión
Consultiva OC-17/2001 de 28 de agosto, Corte Interamericana de Derechos Humanos).

En evidente concordancia con lo ya referido, desde la visión de los pueblos ancestrales indígena
originarios, irradia el paradigma comunitario de la cultura de la vida para “vivir bien”, que
plasma la práctica cotidiana del respeto, de la relación armónica y el equilibrio con todo lo que
existe, bajo el concepto que todo en la vida está interconectado, es interdependiente y está
interrelacionado. Así, el principio de suma qamaña (vivir bien), se constituye en un imperativo
categórico para toda la sociedad plurinacional, con mayor razón en los administradores de
justicia, servidoras y servidores públicos, cuyo discurrir debe desarrollarse conforme a los fines
y funciones del nuevo Estado, enunciados en el art. 9 de la CPE; en ese orden, la dimensión
espiritual, afectiva y social del "buen vivir", en el contexto indígena, está basado en el compartir
integral de todo lo que compone la vida.

En el ámbito de la problemática en análisis, cabe agregar que el principio de suma qamaña -


sumak kausai, en quechua- asume la integralidad del “vivir bien” como el fundamento moral de
la vida cotidiana e incluye -ante todo- la paz, tanto interna individual como dentro de la familia
como núcleo de la comunidad y entre hombres y mujeres en la pareja (El concepto del sumak
kawsai [buen vivir] y su correspondencia con el bien común de la humanidad. François Houtart).
En ese orden, se traduce en un imperativo transversal de la vida en comunidad, que parte desde
el fuero interno de la persona y se exterioriza mediante su accionar hacia la sociedad en general;
es así que, en correspondencia al “interés superior del niño”, se asume que el suma qamaña
implica no sólo el cuidado especial y las medidas de protección a favor de los menores de edad,
sino que encierra un fin en sí mismo que complementa el principio anterior y procura que el
“vivir bien” se refleje en su integralidad en la construcción de relaciones sociales armónicas,
entre personas y la naturaleza.

III.3. Fundamentos de la tutela solicitada por el accionante

De acuerdo a los antecedentes procesales de la problemática en cuestión y los fundamentos de la


acción de libertad intentada por el accionante, en representación de sus hijos AA y BB, se infiere
que son dos los aspectos denunciados: 1) Por un lado, el incumplimiento por parte de la
demandada, del régimen de visitas impuesto en derivación de la medida provisional de guarda
otorgada a favor del progenitor a través de la Sentencia 128/2011, que se mantenía persistente
tomando en cuenta el recurso de apelación de la que fue objeto, razón por la que esta Resolución
no cobró ejecutoria (Conclusión II.5 de esta Sentencia); y, -con este antecedente-, 2) Se configura
la ilegalidad cometida por la demandada en el incumplimiento del régimen de visitas impuesto,
accionar que se tradujo -a juicio del accionante- en la indebida restricción de la libertad de los
niños. En este contexto y al existir menores de edad involucrados, corresponde un análisis

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1022


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

particularizado de ambas situaciones, a objeto de identificar si se encuentran dentro del ámbito


de tutela de la acción de libertad, conforme se pasa a exponer:

III.3.1. Sobre la medida provisional de guarda dispuesta en el proceso de divorcio

Previamente, corresponde indicar que el art. 42 del CNNA, establece que el instituto de la
guarda: "…tiene por objeto el cuidado, protección, atención y asistencia integral a un niño, niña
o adolescente con carácter provisional y es otorgada mediante resolución judicial a uno de los
progenitores; en casos de divorcio y separación de las uniones conyugales libres y en otros casos
a terceras personas carentes de autoridad parental o tuición legal"; así, en el articulado posterior,
indica las clases de guarda, señalando:

"1. La Guarda en desvinculación familiar, sujeta a lo previsto por el Código de Familia y que es
conferida por el Juez de Familia; y,

2. La Guarda Legal que es conferida por el Juez de la Niñez y Adolescencia a la persona que no
tiene tuición legal sobre un niño, niña o adolescente y sujeta a lo dispuesto por este Código".

Es decir, la guarda es una institución destinada a cuidar, proteger, atender y asistir integralmente
al menor, regida por los principios de interés superior, de autonomía progresiva, de unidad
familiar y de respeto a las opiniones del niño; tiene carácter provisional y se otorga mediante
resolución judicial, pronunciada ya sea por el juez de familia o por el juez de la niñez y
adolescencia, dependiendo de la clase de guarda que se trate; de ello, se infiere que la resolución
que dispuso la guarda de los hijos puede ser modificada cuando el interés superior del niño así lo
requiera, entendiéndose que dicha revisión deberá ser realizada necesariamente por la autoridad
judicial pertinente, a través de los mecanismos que tanto el Código del Niño Niña y Adolescente
como el Código de Familia establecen, sin que pueda asumirse acciones de hecho invocando el
principio de interés superior del niño y la supuesta voluntad de los menores, pues estos aspectos
deben ser analizados por el juzgador para determinarla (SC 0165/2010-R de 17 de mayo).

Hecha esa aclaración y dados los antecedentes procesales de la problemática en análisis, cabe
reflexionar en que admitida la demanda de divorcio y concedida la guarda de los menores AA y
BB a favor de Luis Orlando Camacho Siles (Conclusión II.1), no obstante que a través de la
Sentencia 218/2011, se declaró improbada la demanda de divorcio y sin efecto las medidas
provisionales dispuestas, esta Resolución fue objeto de apelación por el accionante, por cuanto a
momento de suscitarse los hechos que denuncia a través de esta acción, la Resolución no cobró
ejecutoria y por lo tanto, al haberse concedido el indicado recurso en el efecto suspensivo, la
guarda y el consecuente régimen de visitas se mantenían subsistentes y, como corresponde, de
obligatorio cumplimiento por ambas partes intervinientes en el proceso de divorcio en cuestión.

De la relación anterior, resulta evidente la ilegalidad y las acciones de hecho cometidas por la
demandada, bajo el alegato de la supuesta voluntad de sus hijos, obviando el régimen de visitas
establecido en la Resolución de 28 de abril de 2011, que no fue modificado ni eximido de
cumplimiento, considerándose el recurso de apelación opuesto contra la Sentencia 128/2011 y su
consecuente concesión en el efecto suspensivo, que supone que este fallo no cobró ejecutoria.
Sin embargo, esta situación no configura una privación de la libertad de los menores como
tal, sino únicamente se traduce en el incumplimiento de una resolución judicial
pronunciada dentro de un proceso de desvinculación familiar, lo que impele a la autoridad
que conoce la causa ordenar su estricto acatamiento o bien, como es el caso, resolver con
celeridad las peticiones que formularon tanto el accionante como la demandada respecto a la
situación de sus hijos, a través de los memoriales de 9 de enero de 2011; es decir que, al no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1023
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

configurar un acto lesivo del derecho a la libertad de los menores, se encuentra fuera de los
alcances de la tutela de esta garantía constitucional, cuyo detalle se expuso en el Fundamento
Jurídico III.1 que antecede.

Además de ello, no pueden soslayarse los memoriales presentados por ambas partes ante el
Tribunal de garantías, luego de dictarse la Resolución de 14 de enero de 2012, a través de los
cuales se denuncia, por un lado, el incumplimiento de la restitución de los menores -dispuesta en
la acción de libertad- y sobre la base de ello, el inicio de procesos penales contra María Cecilia
Prada Rosas; mientras que por otro, la demandada -reconociendo que aún tiene bajo su cuidado
a sus hijos- pide se considere que es voluntad de los menores el no volver con su padre,
enfatizando que por una “sentencia” dictada por el “juez de la niñez y adolescencia”, se
concedió la guarda a la abuela materna de AA y BB, alegando además que en el proceso de
divorcio se encuentra pendiente de resolver el recurso de casación que opuso el demandante
contra lo dispuesto por el Tribunal de alzada que confirmó la Sentencia 128/11; sin embargo, a
pesar que no consta en el expediente la referida Resolución, ni se precisa a la autoridad judicial
de la niñez y adolescencia aludida, -persistiendo la incertidumbre sobre la situación jurídica de
los menores-, es menester insistir que no es objeto de la acción de libertad el resolver
conflictos que corresponden atenderse en la jurisdicción ordinaria, al no ser la vía para
disponer la restitución de los niños a quien estuviera designado como su guardador, por
cuanto su sola retención por su progenitora no configura privación de libertad ni se
encuentra dentro de los alcances de tutela de esta garantía constitucional, siendo que esta
instancia no tiene competencia alguna para decidir a quién le corresponde la guarda, sino
que -como se dijo en párrafos introductorios a este Fundamento- será el juez de familia o
el juez de la niñez y adolescencia quien defina esta situación, puesto que -se reitera- no
constituye vulneración de los derechos a la libertad o a la vida de los menores, el solo hecho
que se encuentre en controversia su guarda y se hubiera incumplido un régimen de visitas.

III.3.2. Sobre la presunta privación de la libertad de los menores

Según el contexto en el que se suscitó el contenido fáctico de la presente acción de libertad,


resulta incuestionable que no obstante la guarda conferida a favor del accionante respecto a sus
hijos, la madre los retuvo en su poder, como se comprueba por la propia aseveración de la
demandada (Conclusión II.8), la denuncia efectuada por el actual accionante ante la Brigada de
Protección a la Familia y la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (Conclusión II.5 y 6), como
también, ante la Jueza Segunda de Partido de Familia a quien además solicitó la restitución de
las niñas al hogar paterno (según indica la propia Resolución de 14 de enero de 2012,
pronunciada por el Tribunal de garantías, que tuvo acceso al expediente original).

Sin embargo, a este respecto cabe insistir que conforme se expuso en el párrafo final del
Fundamento Jurídico que antecede, el hecho que la demandada retuviera a sus hijos menores de
edad, configura una ilegalidad y no así la restricción de la libertad de los representados del
accionante, ni la vulneración de su derecho a la vida, quedando lo denunciado fuera de los
alcances de la tutela que brinda la acción de libertad, en razón a que se trata del incumplimiento
de una resolución judicial respecto al régimen de visitas vinculado a la guarda concedida a favor
del progenitor; es decir que, era la Jueza de la causa a quien compelía velar por el acatamiento
de lo dispuesto y en su caso, resolver -en virtud al principio de interés superior del niño- la
situación de ambos menores; o bien, -no obstante que no se tiene certeza-, por el “juez de la
niñez y adolescencia”, que ya habría dispuesto conceder la guarda de AA y BB a favor de su
abuela materna (Conclusión II.8); circunstancia última que colisionaría con lo decidido por el
Tribunal de garantías, que resolvió conceder parcialmente la tutela y disponer la restitución de
los menores a favor del accionante, razón por la que a este respecto, es menester enfatizar que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1024
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

esta situación se supera por cuanto los hechos denunciados en esta acción están fuera del alcance
de su protección, pues no implican restricción de los derechos a la libertad y a la vida y, en ese
orden, corresponde denegarse la tutela.

No obstante lo anterior, cabe indicar que era de competencia exclusiva de la Jueza de Familia
definir la situación de los hijos, según refrenda el art. 43 del CNNA, al determinar que la guarda
en desvinculación familiar está sujeta a lo previsto por el Código de Familia y es conferida por
dicha autoridad; o bien, por el juez de la niñez y adolescencia en el proceso de guarda que se
hubiera promovido fuera del proceso de divorcio. Así, se infiere que la Jueza directora del
proceso debió encaminar y orientar a las partes, como disponer sin dilaciones el retorno de los
niños con el padre que tenía la guarda, mucho más si estaba en conflicto la modificación de esa
situación jurídica a consecuencia del accionar de la progenitora. En consecuencia, correspondía -
por esta autoridad- la restitución en su momento de los hijos al seno paterno, hecho que permite
concluir que hubo demora por parte de la Jueza, causando incertidumbre que afectó a los
menores.

A más de ello, independientemente de la autoridad judicial competente para definir la situación


de AA y BB, dado que aparentemente se sustanciarían dos procesos -de divorcio y de guarda-,
esta decisión debe asumirse tomando en cuenta los criterios de valoración señalados tanto por la
Constitución Política del Estado como por el Código de Familia, relativos al mejor cuidado e
interés moral y material de los hijos y también como parámetros, los principios contenidos en la
Convención sobre los Derechos del Niño y las normas del Código del Niño, Niña y Adolescente,
particularmente, los de interés superior del niño y de autonomía progresiva y, en ese ámbito, el
derecho del niño, niña o adolescente de emitir su juicio propio sobre los asuntos que le afecten,
que también se encuentra previsto en el art. 12 de la Convención sobre los Derechos del Niño.

Por lo expuesto, precisamente en ese sentido es que este Tribunal, en observancia del principio
del suma qamaña y de interés superior del niño, no puede ser ajeno a esta problemática que
involucra a menores de edad; por lo que, no obstante de no circunscribirse el contenido fáctico
de esta acción de libertad dentro del ámbito de su tutela, es preciso recalcar que el principio
ético moral de suma qamaña sobre el que se sustenta el Estado, no sólo rige sobre éste y
sus instituciones, sino sobre el accionar de cada uno de sus habitantes -incluidos como es el
caso, a los progenitores de los menores AA y BB-, respecto a quienes, en dicha calidad,
exhorta un comportamiento que vele por el desarrollo integral de sus hijos, priorice su
interés superior y procure un entorno armónico de convivencia; como también, por las
autoridades judiciales en conocimiento de procesos que involucren a menores de edad,
mismas que deben promover un actuar acucioso, diligente y oportuno, a través de
cuidados y medidas especiales, a efecto de prever eventuales transgresiones a los derechos
de la niñez.

En consecuencia, el Tribunal de garantías, al conceder en parte la tutela solicitada, efectuó una


compulsa parcial de los alcances de esta acción; sin embargo, al estar involucrados derechos de
dos menores de edad, corresponde otorgar tutela provisional entretanto se defina su situación
jurídica.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, de conformidad con el art.
12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve: APROBAR la Resolución de
14 de enero de 2012, cursante de fs. 55 a 58 vta., pronunciada por la Sala Penal Tercera del
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1025
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba; y en consecuencia, CONCEDER


provisionalmente la tutela hasta que en la jurisdicción ordinaria se resuelva la situación
jurídica de los menores involucrados, siempre que no existiera una resolución que ya definió
esta circunstancia a momento de pronunciarse la presente Sentencia Constitucional.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0130/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00089-2012-01- AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 02/12 SSA-III de 6 de febrero de 2012, cursante de fs. 571 a 574,
pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por José Luis Acebedo
Aliaga contra Roberto Iván Aguilar Gómez, Ministro de Educación; Daniel Santalla
Tórrez, Ministro del Trabajo, Empleo y Previsión Social; Armando Terrazas,
Viceministro de Educación Superior; Rigoberto de los Ríos, Autoridad Sumariante del
Ministerio de Educación y Nataly Rojas Mendoza, Profesional I de Recursos Humanos del
Ministerio de Educación.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memoriales presentados el 19 y 30 de enero de 2012, cursantes de fs. 301 a 317 y 364 a 367,
respectivamente, el accionante expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A raíz de una denuncia telefónica de “las autoridades sociales” y del Director de la Escuela
Superior de Maestros de Villa Aroma, efectuada el 26 de febrero de 2011 ante el Ministerio de
Educación, acusándole de haberse presentado supuestamente en estado de ebriedad a cumplir las
tareas asignadas como Supervisor de dicho Ministerio para la recepción de exámenes de ingreso
al nombrado establecimiento educativo de la comunidad de Huachaca, se constituyeron en el
lugar, el Viceministro de Educación Superior y la Profesional I de Recursos Humanos del
Ministerio de Educación, procediendo a tomar los exámenes en su lugar, instruyéndole que
retorne a la ciudad de La Paz y que el Director de la Escuela Superior acumule toda la
información escrita de los otros involucrados, en contravención de lo dispuesto por los arts. 16,
inc. d), 40.II, 42, 80 y 81 de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), con relación al art.
32 del Decreto Supremo (DS) 27113 de 23 de julio de 2003, permitiendo que el proceso se lleve
a cabo sin las diligencias previas e imprescindibles por la naturaleza de los hechos denunciados,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1026
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

puesto que la Profesional I de Recursos Humanos, elevó un informe concluyendo que su


conducta se constituye en una contravención flagrante del art.10, incs. b), t) y u) del Reglamento
Interno de Personal del Ministerio de Educación 426/10 de 22 de julio de 2010, por lo que
recomendó se remitan antecedentes ante el Director General de Asuntos Jurídicos para el
análisis correspondiente y el inicio de un proceso disciplinario en su contra, vulnerando de esa
forma el principio de presunción de inocencia al prejuzgar sobre los hechos sucedidos.

Sin un informe de evaluación y dictamen de la Unidad General de Asuntos Jurídicos, se


determinó el inicio de un proceso disciplinario en su contra, vulnerando el debido proceso, la
seguridad jurídica, la presunción de inocencia y el derecho a la defensa, al permitir que se
pronuncie el Auto inicial omitiendo la aplicación de las normas de procedimiento administrativo
sancionador establecidas en la Ley de Procedimiento Administrativo y su Reglamento, puesto
que se abrió el proceso sin que existan suficientes indicios de responsabilidad administrativa por
falta de pruebas y acumulación de pruebas ilegales, en base a las cuales la autoridad sumariante
pronunció el Auto inicial de sumario administrativo interno de 28 de febrero de 2011,
atribuyéndole la contravención de los arts. 10 incs. b), t) y u) 61.II inc. g) del Reglamento
Interno de Personal, señalando audiencia para su declaración informativa, abriendo el plazo de
diez días para la producción de prueba. El referido Auto inicial no contiene las pruebas de cargo
referidas a la solicitud de su informe y justificación, ni de otros funcionarios involucrados,
tampoco el informe de evaluación y dictamen del Director de Asuntos Jurídicos, ni las
diligencias preliminares que de manera escrita deberían ser efectuadas el día de los hechos por el
Viceministro de Educación Superior y la Profesional I de Recursos Humanos del Ministerio de
Educación.

Clausurado el periodo de prueba por decreto de 22 de marzo de 2011, la autoridad sumariante


emitió la Resolución Administrativa (RA) 003/2011 de 24 de marzo, disponiendo su destitución
como Encargado de Archivo y Kardex de Recursos Humanos del Ministerio de Educación,
atribuyéndole la existencia de responsabilidad administrativa, al haber vulnerado los arts. 10
incs. b), t) y u), 11 inc. n) y 61.II inc. g) del Reglamento Interno de Personal del Ministerio de
Educación 426/2010; habiendo tomado como pruebas, entre otras, su declaración informativa
prestada en ausencia de su abogado, por lo que mediante memorial de “28 de marzo de 2011”
impugnó el referido Auto final del sumario seguido en su contra por cuanto no fue juzgado con
todas las pruebas referidas en la Resolución cuestionada, además porque no fueron valorados
todos los antecedentes de los que fue víctima y prueba que acredita su calidad de funcionario de
carrera con más de veintitrés años de servicio; sin embargo, por Resolución 01/2011 de 8 de
abril, la autoridad sumariante ratificó la Resolución impugnada, motivando la presentación de
recurso jerárquico que fue resuelto por Resolución Ministerial de 22 de julio de 2011 dictada por
el Ministro de Trabajo, Empleo y Previsión Social, mediante la cual se confirmó en su totalidad
la Resolución recurrida y en consecuencia la determinación de su destitución, sin tomar en
cuenta ninguna de las pruebas de descargo aportadas; Resolución Ministerial con la cual fue
notificado el 26 de julio de 2011.

Al inicio del proceso administrativo seguido en su contra, se vulneró el derecho a la presunción


de inocencia porque se prejuzgó su culpabilidad al asumir que su persona contravino
flagrantemente los arts. 10 incs. b), t) y u) y 61.II inc. g) del Reglamento Interno de Personal del
Ministerio de Educación 426/10, así como también durante el transcurso del proceso y al
emitirse la Resolución del recurso jerárquico no se anularon obrados por la vulneración de sus
derechos fundamentales, ni que la resolución cuestionada se base en el informe de la Profesional
I de Recursos Humanos, que adolece de veracidad; tampoco se tuvo en cuenta que el Auto
inicial del sumario fue pronunciado sin una previa investigación preliminar, transgrediendo así
los arts. 16, 40, 42, 80, 81 de la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA), tampoco fue
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1027
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

valorada la prueba de descargo que presentó, habiendo fundamentado la Resolución en base a


prueba ilegalmente incorporada, sin respetar los principios de contradicción, inmediación y
publicidad que exige el debido proceso, omitiendo pronunciar la Resolución conforme a los
hechos y derechos impugnados, vulnerando el derecho a la motivación de las resoluciones.

Agrega que la Resolución del recurso jerárquico se basa en la declaración de un solo testigo,
prueba aislada que no genera suficientes elementos de convicción para sostener su condena,
máxime si en el desarrollo del proceso no se estableció su presunto grado de intoxicación
alcohólica, prueba que además no valora la declaración de otros testigos prestadas el 18 de julio
de 2011, tampoco dicha Resolución se pronunció sobre la contravención del art. 61.II inc. g) del
Reglamento Interno de Personal del Ministerio de Educación 426/10, aunque confirmó en su
totalidad la Resolución del recurso de revocatoria, omitiendo en la fundamentación probatoria,
tomar en cuenta las pruebas de cargo aportadas para que en virtud a ellas tome en cuenta sus
antecedentes como causas atenuantes de responsabilidad, para que conforme al principio de
proporcionalidad se le imponga una sentencia más justa.

Por otra parte, se le impuso una sanción que no está prevista en el Reglamento Interno de
Personal, puesto que las contravenciones de los arts. 11 y 12 de la citada norma legal,
consideradas como infracciones graves, les corresponden la amonestación formal por el
inmediato superior, mediante memorando y de ninguna manera la destitución y si bien es cierto
que conforme al art. 61.II inc. a) es causal para el inicio de proceso administrativo el incurrir en
alguna de las prohibiciones establecidas en el art. 11 de éste Reglamento, conforme a Auto
inicial y final del sumario, nunca fue sometido a proceso sancionador con destitución por
contravenir dicho artículo.

Al haberse vulnerado sus derechos fundamentales, interpone la presente acción a efectos de su


reparación.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de sus derechos, garantías del debido proceso, presunción de inocencia,
defensa, motivación de las resoluciones, tipicidad y legalidad, a la honra, reputación, propia
imagen, dignidad, estabilidad laboral y justa remuneración, citando al efecto los arts. 21, 22,
115, 116.I, 117.I y 119.II de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita que se conceda la tutela y se disponga: a) La nulidad de obrados hasta que las
autoridades comisionadas cumplan los actos de investigación preliminar, según las normas del
Procedimiento Administrativo y su Reglamento; b) La restitución inmediata a sus funciones en
el cargo de Encargado de Registro y Kardex del Ministerio de Educación; y, c) El pago de sus
honorarios profesionales desde el día de su destitución, efectuada el 25 de marzo de 2011 a la
fecha, así como de aguinaldo, bonos y otros beneficios que le corresponden, debiendo ser
calificado el pago de daños y perjuicios en ejecución de sentencia.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 6 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 564
a 570, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción.


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1028
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante a través de su abogado ratificó en su integridad los fundamentos expuestos en la


acción de amparo constitucional, puntualizando que: 1) Durante el transcurso del proceso
administrativo disciplinario interno que se siguió en su contra, no se aplicó el principio de
proporcionalidad en ninguna de las resoluciones impugnadas, puesto que no existió correlación
entre la infracción cometida y la sanción impuesta; y, 2) Las resoluciones emitidas dentro del
proceso disciplinario fueron dictadas afectando los principios de oralidad, contradicción y
publicidad, puesto que se basaron en simples informes y la resolución del recurso jerárquico
sólo valoró la declaración de un solo testigo, lo que afecta el principio de legalidad,
proporcionalidad y de motivación de las resoluciones, afectando además el derecho a recurrir.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Luis Alberto del Carpio Gonzales y José Albaro Eguino Medina, en representación del
Ministerio de Educación, a través del informe escrito cursante de fs. 538 a 543 vta. y la
Especialista en Registro y Control de ésta institución, por informe de fs. 562 vta., señalaron que:
i) El Ministerio de Educación aprobó la convocatoria 01/2011 mediante Resolución Ministerial
016/2011 de 17 de enero, dirigida a postulantes a las Escuelas Superiores de Formación de
Maestras y Maestros del Estado Plurinacional de Bolivia, además del respectivo Reglamento,
estableciendo que el Viceministerio de Educación Superior de Formación Profesional, a través
de la Dirección General de Formación de Maestros ejecute su cumplimiento, designándose al
accionante, a la Escuela Superior de Formación de Maestros de Villa Aroma para que reciba la
prueba el 26 de febrero de 2011; ii) Como emergencia de las reiteradas denuncias efectuadas por
el Director de la referida Escuela Superior de Formación, al Ministerio de Educación, en sentido
de estar el accionante en estado de ebriedad, se determinó que el Viceministro de Educación
Superior lleve a cabo el evento de evaluación, motivando esa conducta a que la Profesional I de
Recursos Humanos, emita el informe 0150/2011 de 28 de febrero, detallando los hechos
acaecidos ese día, concluyendo que dichos actos constituyen contravención flagrante de los incs.
b), t) y u) del art. 10 del Reglamento Interno de Personal del Ministerio de Educación 426/10 de
22 de julio, además de considerarse como una infracción grave que afecta a la imagen
institucional, por lo que la Dirección General de Asuntos Jurídicos remitió antecedentes a la
autoridad sumariante para que inicie el proceso en el marco del DS 23318-A, de 3 de noviembre
del 1992, en base a lo cual, al encontrarse indicios de responsabilidad se dictó el Auto Inicial de
Sumario Administrativo Interno 003/2011 de 3 de marzo contra el accionante, disponiendo que
se presente para prestar su declaración informativa acompañado de su abogado defensor,
abriendo el término probatorio de diez días hábiles, el que una vez concluido, se dictó el Auto de
clausura de término probatorio y luego se emitió la RA 003/2011, concluyendo que existe
responsabilidad administrativa contra el accionante y por tanto se lo sancionó con la destitución;
resolución que fue apelada y confirmada mediante Resolución 001/2011 de 12 de abril; iii) El
accionante interpuso recurso jerárquico el 20 de abril de 2011 impugnando la Resolución del
recurso de apelación; mismo que fue remitido a la ex Superintendencia del Servicio Civil actual
Dirección General del Servicio Civil, tomando en cuenta la calidad de funcionario público de
carrera; y, iv) El proceso sumario administrativo fue seguido cumpliendo todas las normas
previstas en el DS 23318-A, recibiéndose todas las pruebas dentro del período probatorio que
generaron suficientes elementos de convicción respecto de la conducta del procesado, en base a
la cual se dictó la resolución sancionándolo con destitución en el ejercicio de sus funciones.

Por su parte los representantes del Ministro y del Viceministro de Trabajo y Previsión Social,
luego de detallar los antecedentes del proceso administrativo seguido contra el accionante,
agregaron que: a) En mérito a las disposiciones contenidas en los DDSS 29894 de 7 de febrero
de 2009 y 0071 de 9 de abril del mismo año, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión
Social, a través del Viceministerio de Empleo, Servicio Civil y Cooperativas, asumió las
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1029
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

funciones correspondientes a la tramitación de los recursos jerárquicos interpuestos por


funcionarios de carrera o aspirantes a tal condición, por la vía administrativa, por lo que una vez
que fue remitido el recurso jerárquico interpuesto por el accionante, se radicó el mismo mediante
decreto 026/2011 de 31 de mayo, otorgando un plazo perentorio de seis días a las partes para la
presentación de las pruebas pertinentes, cumpliendo lo dispuesto por el art. 34 del Reglamento
de Recursos de Revocatoria y Jerárquicos, aprobado por el DS 26319, de 15 de septiembre de
2001, a cuyo vencimiento fue emitida la Resolución Ministerial 474/2011 de 22 de julio, por la
cual el Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, dispuso confirmar en su totalidad la
resolución del recurso de revocatoria 001/2011 impugnada y en consecuencia la determinación
asumida en la Resolución final de Sumario Administrativo Interno 003/2011; b) Luego de la
valoración de la prueba de descargo presentada por el ahora accionante, en instancia de la
revocatoria, en base a un análisis de la normativa vigente y de una valoración de las pruebas
aportadas, se emitió la Resolución del recurso de revocatoria y ante la interposición del recurso
jerárquico se abrió la competencia del Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, que
pronunció Resolución dentro de los lineamientos del art. 33 y ss. del DS 26319; c) Durante la
tramitación del recurso jerárquico, se cumplieron todos los procedimientos establecidos por el
art. 4 de la referida resolución ministerial, habiéndose observado que en toda la tramitación del
proceso interno se cumplieron de manera estricta, todos los procedimientos establecidos en la
norma, consiguientemente no tiene asidero legal la denuncia de vulneración del debido proceso;
y, d) El art. 62.II del Estatuto del Funcionario Público (EFP), establece que las decisiones
emitidas por la Superintendencia del Servicio Civil son definitivas y no admiten en la vía
administrativa, recurso ulterior alguno, salvo el contencioso administrativo, lo que significa que
el accionante pretende sorprender al Tribunal de garantías, pues la acción de amparo
constitucional, no es sustitutiva de un procedimiento administrativo, debidamente regulado por
normativa especial y expresa que se ha cumplido a cabalidad.

I.2.3. Resolución

La Sala Social y Administrativa Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz,


conformada por los Vocales Iván Campero Villalba y Freddy Paz Valdivia, constituida en
Tribunal de garantías, pronunció la Resolución 02/12 SSA-III de 6 de febrero de 2012, cursante
de fs. 571 a 574, denegando la tutela solicitada por el accionante, con los siguientes
argumentos: 1) Se evidencia que se llevó a cabo un proceso interno contra el accionante, por un
juez natural que estaba constituido por el Reglamento Interno del Ministerio de Educación, es
decir imbuido del principio de legalidad, que actuó en apego a las normas que determinan la
tipicidad y la sanción; 2) En cuanto al componente de tipicidad se tiene que está plenamente
establecido en la norma y si bien, es cierto que no existe un elemento científico que acredite que
el accionante en el momento de los hechos se encontraba en “grado alcohólico” alguno, es
evidente que existen pruebas concomitantes, como los informes de los funcionarios públicos que
por su naturaleza dan fe, así como la denuncia de las “autoridades sociales” del lugar, extremos
que se encuentran en concordancia y establecen el elemento de tipicidad, además que el
accionante a lo largo de todo el proceso hizo uso irrestricto del derecho a la defensa al estar
asistido de un profesional abogado, habiendo interpuesto todos los recursos que la ley le
franquea; y, 3) En el Reglamento Interno de Personal del Ministerio de Educación, aprobado por
la Resolución 426/10, el art. 11 inc. n) tipifica el extremo por el cual fue sancionado el
accionante; asimismo, el art. 56 inc. e) de la citada norma legal, determina la sanción de
destitución a los servidores que incurran en las faltas antes mencionadas.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1030
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.1. A través del Informe 0150/2011, la Profesional I de Recursos Humanos del Ministerio de
Educación, hizo conocer que el funcionario designado como Supervisor de ese Ministerio, para
la recepción de exámenes de ingreso a la Escuela de Formación de Maestros Villa Aroma, ahora
accionante, el día del examen se encontraba en estado de ebriedad y por tanto no se encontraba
en condiciones de cumplir con esa actividad encomendada, por lo que al haberse constatado ese
hecho que contraviene el art. 10 incs. b), t) y u) del Reglamento Interno de Personal del
Ministerio de Educación 426/10 de y al tratarse de una conducta que afecta la imagen
institucional, de acuerdo a lo previsto en el art. 61.II, inc. g) del citado Reglamento, sugiere la
remisión de antecedentes a la Dirección General de Asuntos Jurídicos para el análisis
correspondiente, y en su caso, el inicio de un proceso disciplinario (fs. 6 a 8).

II.2. Mediante Auto Inicial del Sumario Administrativo Interno 003/2011, el sumariante del
Ministerio de Educación, dispuso la instauración de un proceso sumario administrativo interno
contra el ahora accionante, por el presunto incumplimiento y vulneración de los arts. 10 inc. b),
t) y u), 11 inc. n) y 61.II del Reglamento Interno citado, ordenando su notificación a efectos de
prestar su declaración informativa, abriendo el término de prueba de diez días a partir de su legal
notificación para la recepción de pruebas (fs. 20 a 22).

II.3. Concluido el término probatorio, la sumariante del Ministerio de Educación, emitió la RA


003/2011, determinando la existencia de responsabilidad administrativa contra el accionante, al
haber adecuado su conducta en la vulneración de los arts. 10 incs. b), t) y u), 11 inc. c) y 61.II
del Reglamento Interno de Personal del Ministerio de Educación, disponiendo su destitución del
cargo de Encargado de Archivo y Kardex de Recursos Humanos, como sanción de los actos en
los que incurrió (fs. 24 a 63).

II.4. Notificado el accionante el 24 de marzo de 2011 con la RA 003/2001, por memorial


presentado el 31 del mes y año indicado, interpuso recurso de apelación, el mismo que fue
resuelto mediante Resolución 01/2011, emitida por la sumariante del Ministerio de Educación,
ratificando la resolución impugnada, así como la determinación de destitución en el ejercicio de
funciones (fs. 64 a 67 y 95 a 99).

II.5. Por memorial presentado el 20 de abril de 2011, el accionante interpuso recurso jerárquico
contra la Resolución 01/2011, alegando que dentro del proceso administrativo interno que se
siguió en su contra no fueron valoradas las declaraciones prestadas en su oportunidad por los
choferes que se encontraban en el lugar, radicándose dicho recurso en el Viceministerio de
Empleo, Servicio Civil y Cooperativas, mediante decreto de 31 de mayo de 2011 y por
Resolución 019/2011 de misma fecha, admitiéndose el mencionado recurso jerárquico, fijando
un término de prueba de seis días hábiles común a las partes, computables desde la última
notificación (fs. 135 a 138).

II.6. Producida la prueba literal y testifical ofrecida por el accionante, a través de la Resolución
Ministerial 474/11 de 22 de julio de 2011, el Ministro de Trabajo, Empleo y Previsión Social,
determinó confirmar la Resolución del recurso de revocatoria 01/2011 y en consecuencia la
destitución dispuesta en la RA 003/2011 (fs. 156 a 217).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante considera vulnerados sus derechos, principios y garantías del debido proceso,
presunción de inocencia, defensa, motivación de las resoluciones, tipicidad y legalidad, a la
honra, reputación, propia imagen, dignidad, estabilidad laboral y justa remuneración, por cuanto
a raíz de una denuncia telefónica en sentido de haberse presentado en estado de ebriedad para
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1031
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

supervisar la recepción de exámenes de ingreso de maestros a la Escuela Superior de Villa


Aroma, se le instauró un proceso disciplinario interno, sin que existan suficientes indicios de
responsabilidad administrativa, atribuyéndole la contravención de los arts. 10 incs. b), t) y u),
61.II inc. g) del Reglamento Interno de Personal del Ministerio de Educación 426/10, que
concluyó con la RA 003/2011, disponiendo su destitución del cargo que desempeñaba y no
obstante que, impugnó dicha determinación mediante recurso de apelación y jerárquico, tanto la
autoridad sumariante como el Ministro de Trabajo, Empleo y Previsión Social, ratificaron y
confirmaron en su totalidad la Resolución impugnada, sin tomar en cuenta ninguna de las
pruebas de descargo aportadas; basándose en simples informes y valorando la declaración de un
solo testigo. Corresponde dilucidar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela impetrada.

III.1. La valoración de la prueba constituye una facultad privativa de los órganos


jurisdiccionales ordinarios y administrativos

La jurisprudencia constitucional estableció como regla general que: “la facultad de valoración
de la prueba corresponde privativamente a los órganos jurisdiccionales ordinarios o a las
instancias ante las que se tramitaron esos procesos, no siendo pertinente que el Tribunal
Constitucional Plurinacional se pronuncie sobre cuestiones que son de exclusiva competencia
de dichas instancias y menos aún atribuirse la facultad de revisar la valoración de la prueba
efectuada por las autoridades judiciales o administrativas competentes, toda vez que el recurso
de amparo constitucional tiene como única finalidad el restablecer los derechos fundamentales
que fueron conculcados por autoridades o particulares” (SC 1461/2003-R de 6 de octubre). Sin
embargo, existen supuestos en que la jurisdicción constitucional puede revisar la valoración de
la prueba por las autoridades jurisdiccionales ordinarias o administrativas, conforme estableció
la SC 0285/2010-R de 7 de junio, al señalar que: “…el Tribunal Constitucional precautelando
los derechos y garantías constitucionales de los ciudadanos, en cumplimiento de una de las
finalidades por las que ha sido creado este órgano, como es el respeto y vigencia de los
derechos y garantías fundamentales de las personas, ha establecido los únicos supuestos para
que la jurisdicción constitucional ingrese a revisar la valoración realizada por dichas
autoridades: 1) Cuando en dicha valoración exista apartamiento de los marcos legales de
razonabilidad y equidad previsibles para decidir y 2) Cuando se haya omitido arbitrariamente
valorar la prueba y su lógica consecuencia sea la lesión de derechos fundamentales y garantías
constitucionales, es decir en el primer supuesto cuando en la labor valorativa se apartan del
procedimiento establecido valorando arbitraria e irrazonablemente y en el segundo, que
actuando arbitrariamente no se haya procedido a la valoración de la prueba, por cuya omisión
se vulneren derechos y garantías fundamentales”.

En el mismo sentido la SC 0965/2006-R de 2 de octubre, ha establecido los presupuestos que


deben ser cumplidos por la parte accionante, cuando expresó: “…siendo competencia de la
jurisdicción constitucional, revisar excepcionalmente la labor de valoración de la prueba
desarrollada por la jurisdicción ordinaria, únicamente, se reitera, cuando en dicha valoración:
a) exista apartamiento de los marcos legales de razonabilidad y equidad previsibles para
decidir; o, b) cuando se haya adoptado una conducta omisiva expresada, entre otras, en no
recibir, producir o compulsar cierta prueba inherente al caso y, su lógica consecuencia sea la
lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales; dicha competencia del Tribunal
Constitucional, se reduce, en ambos casos, a establecer la ausencia de razonabilidad y equidad
en la labor valorativa o la actitud omisiva en esta tarea, pero en ningún caso a sustituir a la
jurisdicción ordinaria examinando la misma.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1032


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En ese orden de razonamiento para que este Tribunal pueda cumplir con esta tarea, es
necesario que la parte procesal, que se considera agraviada con los resultados de la valoración
efectuada dentro de un proceso judicial o administrativo, invocando la lesión a sus derechos
fundamentales, exprese de manera adecuada y precisa en los fundamentos jurídicos que
sustenten su posición (recurso de amparo), lo siguiente:

Por una parte, qué pruebas (señalando concretamente) fueron valoradas apartándose de los
marcos legales de razonabilidad y equidad previsibles para decidir; o, cuáles no fueron
recibidas, o habiéndolo sido, no fueron producidas o compulsadas; para ello, será preciso, que
la prueba no admitida o no practicada, se haya solicitado en la forma y momento legalmente
establecidos, solicitud, que en todo caso, no faculta para exigir la admisión de todas las
pruebas que puedan proponer las partes en el proceso, sino que atribuye únicamente el derecho
a la recepción y práctica de aquellas que sean pertinentes, correspondiendo a los órganos
judiciales ordinarios, el examen sobre la legalidad y pertinencia de las pruebas solicitadas,
debiendo motivar razonablemente la denegación de las pruebas propuestas. Por supuesto, una
vez admitidas y practicadas las pruebas propuestas declaradas pertinentes, a los órganos
judiciales, les compete también su valoración conforme a las reglas de la lógica y de la sana
crítica, según lo alegado y probado.

Asimismo, es imprescindible también, que el recurrente señale en qué medida, en lo conducente,


dicha valoración cuestionada de irrazonable de inequitativa o que no llegó a practicarse, no
obstante haber sido oportunamente solicitada, tiene incidencia en la Resolución final; por
cuanto, no toda irregularidad u omisión procesal en materia de prueba (referida a su admisión,
a su práctica, a su valoración, etc.) causa por sí misma indefensión material
constitucionalmente relevante, correspondiendo a la parte recurrente, demostrar la incidencia
en la Resolución final a dictarse, es decir, que la Resolución final del proceso hubiera podido
ser distinta de haberse practicado la prueba omitida, o si se hubiese practicado correctamente
la admitida, o si se hubiera valorado razonablemente la compulsada; puesto que resulta
insuficiente, para la viabilidad del recurso de amparo, la mera relación de hechos; porque sólo
en la medida en que el recurrente exprese adecuada y suficientemente sus fundamentos
jurídicos, la jurisdicción constitucional podrá realizar la labor de contrastación, que amerita
este tema de revisión excepcional de la labor de la valoración de la prueba realizada por la
jurisdicción ordinaria; máxime si se tiene en cuenta que el art. 97 de la LTC, ha previsto como
un requisito de contenido, el exponer con precisión y claridad los hechos que le sirvan de
fundamento y precisar los derechos o garantías que se consideren restringidos, suprimidos o
amenazados, señalando en qué consiste la restricción o supresión.

Es de advertir, que esta última exigencia de acreditación de la relevancia de la prueba


denegada, o de la prueba valorada irrazonable o inequitativamente, se proyecta en un doble
plano: por un lado, el recurrente debe demostrar la relación entre los hechos que se quisieron y
no se pudieron probar y las pruebas inadmitidas o no practicadas, o en su caso de la
interpretación discrecional o arbitraria de la prueba practicada; y, por otro lado, debe
argumentar el modo en que la admisión y la práctica de la prueba objeto de la controversia,
habrían podido tener una incidencia favorable a la estimación de sus pretensiones; sólo en tal
caso -comprobada que la decisión final- pudo, tal vez, haber sido otra si la prueba se hubiera
practicado o hubiese sido valorada conforme a derecho dentro de un marco de razonabilidad,
podrá apreciarse también el menoscabo efectivo del derecho fundamental invocado de quien
por este motivo solicita el amparo constitucional”.

III.2. La problemática planteada en el caso de análisis

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1033


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el caso motivo de análisis, el accionante manifiesta que como emergencia de una denuncia
telefónica, en sentido de haberse presentado en estado de ebriedad para supervisar la recepción
de exámenes de ingreso de maestros a la Escuela Superior de Villa Aroma, se le instauró un
proceso disciplinario interno, sin que existan suficientes indicios de responsabilidad
administrativa, atribuyéndole la contravención de los arts. 10 incs. b), t) y u) y 61.II inc. g) del
Reglamento Interno de Personal, que concluyó con la RA 003/2011, disponiendo su destitución
del cargo que desempeñaba y no obstante que impugnó dicha determinación mediante recurso de
apelación y jerárquico, tanto la autoridad sumariante como el Ministro de Trabajo, Empleo y
Previsión Social, ratificaron y confirmaron en su totalidad la Resolución impugnada, sin tomar
en cuenta ninguna de las pruebas de descargo aportadas; basándose en simples informes y
valorando la declaración de un solo testigo.

Al respecto, se advierte que el accionante pretende que a través de la acción de amparo


constitucional, el Tribunal Constitucional Plurinacional ingrese a valorar la prueba que según él,
no fue valorada por ninguna de las autoridades demandadas, pues sostiene que se basaron en
simples informes y en la declaración de un sólo testigo, lo cual no es posible tal como se señaló
precedentemente, al ser la valoración de las pruebas una facultad privativa de los jueces
ordinarios y administrativos, menos si para el efecto no cumplió con los presupuestos
establecidos por la jurisprudencia constitucional para poder ingresar a la revisión de dicha
valoración.

Consiguientemente, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones y alcances


de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías, al haber denegado la
tutela solicitada, ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y dado una
correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 02/12
SSA-III de 6 de febrero de 2012, cursante de fs. 571 a 574, pronunciada por la Sala Tercera
Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, y en consecuencia,
DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0131/2012


Sucre, 2 de mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00088-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1034
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución de 1 de febrero de 2012, cursante de fs. 89 a 90 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Valentín Gutiérrez Quispe en
representación de la Asociación de Fomento a la Producción Agropecuaria para Carrasco
Tropical (AFPAC) contra Domingo de Siles Laime Ponce, Juez Agrario del departamento
de Cochabamba, en suplencia legal del Juzgado de su similar de Ivirgarzama, del mismo
Departamento

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 30 de enero de 2012, cursante de fs. 76 a 79, el accionante expone
los siguientes fundamentos:

I.1.1. Fundamentos de hechos que motivan la acción

El 1 de agosto de 2011, en representación de AFPAC, presentó cuatro demandas ejecutivas en


forma simultánea ante el Juzgado Agrario de Ivirgarzama, en virtud de la ampliación de
competencias del juez agrario conforme a la Ley 3545 de 28 de noviembre de 2006, por su parte,
el referido Juez Agrario, por decreto de 10 del citado mes y año, dispuso que se acompañe a la
demanda el acta de nombramiento de gerente y poder especial y expreso.

Pese a ser innecesario y gravoso tal requerimiento, la Directiva de la AFPAC, le otorgó un


nuevo poder ampliando las facultades para formular demandas ejecutivas además de legalizar el
acta de la asamblea ordinaria de 10 de abril de 2010, en la que se le ratifica en el cargo de
Gerente, documentos que fueron acompañados mediante memorial de 16 de agosto de 2011; no
obstante, el Juez, señala el decreto de 19 del mismo mes y año, nuevamente dispuso que
acompañe poder especial y expreso, bajo apercibimiento de no tenerse por presentada la
demanda conforme prevé el art. 333 del Código de Procedimiento Civil (CPC).

Frente a tales circunstancia, solicitó audiencia al Juez de la causa, quien le pidió un poder
distinto para cada proceso ejecutivo indicando específicamente el nombre de la persona a ser
demandada y tras considerar que quien demanda es una persona jurídica que para efectos de su
representación otorga un poder único a su Gerente que es elegido por cinco años, le señaló que
presente un memorial exponiendo esos hechos.

El 22 de agosto de 2011, presentó memorial señalando lo expresado en forma verbal con el Juez;
no obstante, por decreto de 23 de agosto de 2011, la autoridad judicial mencionada ordenó
cumplir en el plazo de cinco días con los decretos de 10 y 19 del mismo mes y año, bajo
apercibimiento de tenerse por no presentada la demanda; habiendo sido notificado con la
mencionada providencia mediante cédula en el tablero del Juzgado el 13 de septiembre de 2011,
y no así en su domicilio procesal señalado en su primer memorial, puesto que toda disposición
que determina una conminatoria debe ser notificada personalmente o por cédula en el domicilio
señalado.

Por Auto de 29 de septiembre de 2011, se declaró por no presentada la demanda, por lo que -
añade- interpuso “la nulidad de obrados hasta la notificación por cédula” (sic), incidente que fue
rechazado por Auto de 31 de octubre del mismo año, así como dispuesto, por Auto de 16 de
noviembre del mismo año, “no ha lugar” al recurso de reposición del rechazo del incidente,
imponiéndole además una multa de Bs100.- (cien bolivianos).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1035


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos al debido proceso y el de acceso a la justicia, sin citar
la norma que los contiene.

I.1.3. Petitorio

El accionante pide declarar “procedente” la presente acción, anulando el Auto de 29 de


septiembre de 2011 y siguientes, ordenando la admisión de las cuatro demandas ejecutivas, con
la correspondiente reparación de daños y perjuicios, con costas.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 1 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 88
y vta., con la presencia de la parte accionante; ausente el Juez demandado y el representante del
Ministerio Público, pese a su legal citación.

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado y accionante a la vez, ratificó el contenido íntegro de la acción de amparo


constitucional.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

No obstante su legal citación conforme consta a fs. 87 vta., por orden instruida, el demandado no
presentó informe ni se apersonó a la audiencia programada.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, Boris Espinoza Vargas, Juez de Partido, Mixto y de Sentencia de


Ivirgarzama del departamento de Cochabamba, constituido en Juez de garantías, pronunció la
Resolución de 1 de febrero de 2012, cursante de fs. 89 a 90 vta., por la que concedió la tutela
solicitada, disponiendo la notificación con el decreto de 23 de agosto de 2011, en el domicilio
procesal señalado en su primer escrito, anulando todas las demás actuaciones posteriores; con
los siguientes fundamentos: a) El decreto de 23 de agosto de 2011, es una conminatoria bajo
alternativa de tenerse por no presentada la demanda, que fue notificado al accionante en el
tablero del Juzgado incumpliendo lo exigido por el art. 137 inc. 5) del CPC, en relación al art.
135 del mismo Código; b) En la demanda ejecutiva seguida por Valentín Gutiérrez Quispe, el
Juez de causa, proveyendo al Otrosí cuatro del memorial de demanda, en el que se señala el
domicilio legal, por decreto de 10 de agosto de 2011, determinó “Señalado el domicilio procesal,
sin perjuicio de notificarse en secretaría del juzgado, en sujeción del art. 14 de la ley 1760” (sic),
norma que si bien sustituye al art. 133 del CPC, las partes tienen la obligación de apersonarse
los días martes y viernes a fin de notificarse con las actuaciones producidas; c) En las demandas
ejecutivas en cuestión no hay auto alguno que determine siquiera la admisión de la demanda; y,
d) El art. 115.II de la Constitución Política del Estado (CPE), establece que: “El Estado
garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia plural, pronta, oportuna,
gratuita, transparente y sin dilaciones”.

II. CONCLUSIONES

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1036


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Efectuada la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. El 1 de agosto de 2011, Valentín Gutiérrez Quispe, a nombre de AFPAC, mediante


memorial dirigido al Juez Agrario de Ivirgarzama, interpuso demanda ejecutiva contra
Gualberto Siancas Montaño (fs. 39 a 40). Por decreto de 10 de agosto de 2011, el Juez Agrario
de Cochabamba, en suplencia legal de su similar de Ivirgarzama, determinó que: “…el
impetrante acompañe el acta de nombramiento de Gerente de la asociación actualizado y
acredite su personería con un poder especial y expreso” (sic) porque la documentación adjunta,
entre otros, no cumple con las exigencias de los arts. 56 y 58 del CPC (fs. 41).

II.2. Por decreto de 19 de agosto de 2011, el Juez Agrario de Cochabamba, en suplencia,


determina “Por última vez” (sic) y bajo apercibimiento del art. 333 del CPC, que el demandante
acredite personería acompañando poder especial y expreso porque ninguno de los poderes
adjuntos otorgan facultades “para iniciar contra Eduardo Sánchez Villarroel” (sic) (fs. 48).

II.3. Por memorial de 22 de agosto de 2011, Valentín Gutiérrez Quispe, en representación


AFPAC reitera solicitud de admisión de la demanda formulada contra Justino Reyes Durano
(fs. 50 y vta.).

II.4. El 23 de agosto de 2011, el Juez demandado dispone que el impetrante cumpla en el plazo
de cinco días con lo dispuesto por decretos de 10 y 19 del mismo mes y año, bajo
apercibimiento de tenerse por no presentada la demanda (fs. 51), decreto con el que Valentín
Gutiérrez Quispe fue notificado el 13 de septiembre de ese año (fs. 52).

II.5. Por Auto de 29 de septiembre de 2011, el Juez Agrario de Cochabamba, previo informe del
Secretario del Juzgado de Ivirgarzama, declaró por no presentada la demanda (fs. 54).

II.6. Por memorial de 19 de octubre de 2011, Valentín Gutiérrez Quispe, en representación


AFPAC, pidió la nulidad de obrados dentro del proceso ejecutivo seguido contra Eduardo
Sánchez Villarroel, en razón a que fue notificado en tablero del Juzgado de Ivirgarzama y no en
su domicilio señalado (fs. 55 y vta.).

II.7. Por Auto de 31 de octubre de 2011, el Juez Agrario de Cochabamba, dispuso “no ha lugar a
la nulidad de la diligencia de fecha 13 de septiembre de 2011”. Interpuesto recurso de reposición
contra la providencia de rechazo (fs. 56 y vta.), el Juez, por Auto de 16 de noviembre del citado
año, declara “no ha lugar a la reposición del Auto de fecha 31 de octubre de 2011” (fs. 59 a 60).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que la autoridad demandada lesionó sus derechos al debido proceso y de
acceso a la justicia, puesto que la autoridad demandada además de no admitir las acciones
ejecutivas que planteó a nombre de la AFPAC, por Auto de 29 de septiembre de 2011,
determinó que se tiene por no presentada la demanda, determinación con la que fue notificado
en el tablero del Juzgado y pese a que pidió nulidad de dicha diligencia puesto que debía
notificársele personalmente o por cédula en su domicilio señalado, su petición de nulidad fue
rechazada, así como la reposición planteada. Por consiguiente, corresponde dilucidar en
revisión, si los hechos denunciados son evidentes y si constituyen actos ilegales que vulneraron
los derechos y garantías constitucionales.

III.1. De la acción de amparo constitucional


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1037
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la presente acción


tutelar elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a dicha la
acción de amparo constitucional instituida en la Constitución Política del Estado, con relación, a
la naturaleza de la institución jurídica constitucional.

La Constitución Política del Estado, en la Sección II, del Capítulo Segundo (Acciones de
Defensa) del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte
(Bases fundamentales del Estado - derechos, deberes y garantías) ha instituido la acción de
amparo constitucional. En ese marco, el art. 128 establece: “La Acción de Amparo
Constitucional tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley”. A su vez el art. 129.I de la CPE,
resalta que: “La Acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea
afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de
acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados”.

El art. 73 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), al referirse al objeto de


esta acción, señala lo siguiente: “La Acción de Amparo Constitucional tendrá lugar contra actos
u omisiones ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva,
que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías reconocidos
por la Constitución Política del Estado y la ley”.

Esta acción de defensa en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que la Ley


Suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección cuyo objeto es el
restablecimiento inmediato y efectivo de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados, a través de un procedimiento judicial sencillo, rápido y expedito, frente a
situaciones de lesión provenientes de la acción u omisión de servidores públicos o particulares;
siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para
reparar la lesión producida.

III.2.De la protección de los derechos fundamentales en general y del debido proceso en


particular

La Constitución Política del Estado, como norma suprema del ordenamiento Jurídico, señala que
Bolivia se constituye en un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, y
define como uno de los fines esenciales del Estado, el garantizar el cumplimiento de los
principios, valores, derechos y deberes reconocidos y consagrados por ella. La voluntad del
constituyente en este sentido, hizo que la Norma Fundamental configure la protección de los
derechos fundamentales y garantías constitucionales de las personas y de las naciones y pueblos
indígenas originario campesinos como uno de los ejes más importantes del Estado.

Para hacer efectivos estos derechos y no queden los mismos como simples enunciados, se ha
instituido la acción de amparo constitucional (antes instituida como “recurso de amparo
constitucional”), así como, por otra parte, el Tribunal Constitucional Plurinacional, como el
órgano llamado a precautelar el respeto y vigencia de los derechos y garantías constitucionales.

Igualmente, es necesario señalar que la Constitución Política del Estado, además de establecer
que ella goza de primacía frente a cualquier otra disposición normativa, de acuerdo con lo
previsto por el art. 410.II de la CPE, determina que el bloque de constitucionalidad está
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1038
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

integrado por los tratados y convenios internacionales en materia de Derechos Humanos


(además de las normas de Derecho Comunitario). En ese mismo contexto, de acuerdo al art. 13
CPE, inserto en el Capítulo relativo a los Derechos Fundamentales y Garantías; los tratados y
convenios internacionales ratificados por la Asamblea Legislativa Plurinacional, que reconoce
los derechos humanos, prevalecen en el orden interno y, además, que los derechos y deberes
consagrados en la Constitución se interpretaran de conformidad con los tratados internacionales
de derechos humanos ratificados por Bolivia.

Con relación al debido proceso, la Constitución Política del Estado en el Capítulo Primero de las
Garantías Jurisdiccionales, del Título IV de la Primera Parte, en el art. 115.II señala que: “El
Estado garantizará el derecho al debido proceso…” así como en el art. 117.I prevé que: “ninguna
persona puede ser condenada sin haber sido oída y juzgada previamente en un debido
proceso...”.

En lo que concierne a instrumentos internacionales, cabe mencionar en primer lugar a la


Declaración Universal de Derechos Humanos aprobada por la Asamblea General de las
Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948 en su Resolución 217 A (III), cuyo art. 10, sobre el
derecho a ser oído, establece: “toda persona tiene Derecho, en condiciones de plena igualdad, a
ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial para la
determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra
ella en materia penal”.

En el mismo sentido, la Convención Americana sobre Derechos Humanos o Pacto de San José
de Costa Rica, de 22 de noviembre de 1969, ratificada por Bolivia mediante Ley 1430 de 11 de
febrero de 1993, en su art. 8, sobre las garantías judiciales indica entre otros puntos, el que: “1.
Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable,
por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la
ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella, o para la
determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro
carácter …”.

Del mismo modo, el art. 14.1 del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos, señala
que: “Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda persona tendrá
derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un tribunal competente,
independiente e imparcial, establecido por la ley, en la substanciación de cualquier acusación de
carácter penal formulada contra ella o para la determinación de sus derechos u obligaciones de
carácter civil. La prensa y el público podrán ser excluidos de la totalidad o parte de los juicios
por consideraciones de moral, orden público o seguridad nacional en una sociedad democrática,
o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la medida estrictamente
necesaria en opinión del tribunal, cuando por circunstancias especiales del asunto la publicidad
pudiera perjudicar a los intereses de la justicia; pero toda sentencia en materia penal o
contenciosa será pública, excepto en los casos en que el interés de menores de edad exija lo
contrario, o en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la tutela de menores”.

Sin perjuicio del señalamiento de otras garantías mínimas que deben tenerse en cuenta en la
sustanciación de un proceso; lo transcrito, de un modo general, trata precisamente del derecho
de las personas a ser sometido a un proceso antes de ser sancionado, el mismo que debe
estar revestido de una serie de garantías jurisdiccionales, entre las cuales está la de ser
juzgado por un Juez competente, independiente e imparcial.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1039


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Los Estados partes de las convenciones e instrumentos internacionales aludidas tienen el


compromiso, y así lo establece la Ley Fundamental, de respetar los derechos y libertades, y
garantizar su libre y pleno ejercicio. Como se ha señalado, la Constitución alude al debido
proceso, como un derecho fundamental constitucional y naturalmente a uno de sus elementos
constitutivos esenciales: el derecho al juez natural que comprende el derecho de las
personas a que la causa a las que están sujetas, sea sustanciada por la autoridad, investida
de jurisdicción y competencia con anterioridad al hecho que motiva el proceso.

III.3. Análisis del caso concreto

La documentación que informa los antecedentes del expediente, evidencian que el accionante a
nombre de la AFPAC., presentó demanda ejecutiva contra Gualberto Siancas Montaño, la
misma que, antes de ser admitida motivó a que el Juez Agrario de Cochabamba, en suplencia
legal del Juez de Ivirgarzama, requiera se acompañe el acta de nombramiento de Gerente de la
Asociación actualizado y acredite su personería con un poder especial y expreso; no obstante si
bien figura entre los antecedentes un memorial que dice cumplir lo dispuesto; sin embargo, el
decreto por el que se apercibe cumplir con lo específicamente extrañado, corresponde a otro
proceso ejecutivo (contra Eduardo Sánchez Villarroel). Si bien el accionante refiere en el
memorial de la acción de amparo constitucional que presentó cuatro demandas ejecutivas, la
documentación se limita a acompañar sólo algunos actuados del proceso contra Gualberto
Siancas Montaño y ya sea por equívoco o por otras circunstancias que no corresponde analizar,
además del decreto antes citado dentro del proceso ejecutivo contra Eduardo Sánchez Villarroel,
también presenta un memorial que es del proceso ejecutivo seguido contra Justino Reyes
Durano, lo cual evidencia que el accionante no acompaña los antecedentes correlativos ni
siquiera de un determinado proceso.

La Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, en los numerales 3, 4 y 5 del art. 77, refiere
que la acción de amparo constitucional debe ser presentada por escrito y cumplir con los
requisitos de exponer con claridad los hechos, identificar los derechos o garantías que se
consideren vulnerados y acompañar la prueba en que se funda la acción; pues el Órgano
llamado a precautelar el respeto y vigencia de los derechos constitucionales para emitir un fallo
no sólo que debe conocer las afirmaciones o fundamentos que motivan la acción, si no que los
hechos en los que se basa ella deben estar respaldada por prueba que den la certeza sobre la
presunta vulneración de los derechos.

Tal entendimiento fue reflejado en la jurisprudencia constitucional que estableció: “... este
Tribunal ha establecido que la determinación del Tribunal de amparo debe obedecer a la
certidumbre sobre si en efecto se ha violado o amenazado un derecho fundamental y/o garantía
constitucional, por lo que es preciso que el recurrente o agraviado, por una parte, aporte los
elementos de prueba suficientes en los que se acredite y demuestre la existencia del acto y/u
omisión denunciado de ilegal, y por otra, ese agraviado también debe acreditar que en el
supuesto acto y/u omisión es responsable la autoridad o persona recurrida por haber tenido
intervención y decisión” (así las SSCC 0354/2002-R, 1110/2003-R, 0140/2004-R y 1651/2003-
R, entre otras).

Así mismo, la SC 1399/2011-R de 30 de septiembre, al respecto determina: “…para que los


actos u omisiones denunciados sean objeto de análisis y reciban la tutela que brinda el recurso
de amparo constitucional, el recurrente o agraviado debe: i) Aportar los elementos de prueba
suficientes en los que acredite y demuestre la existencia del acto y/u omisión denunciado de
ilegal…”

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1040


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo que, este Tribunal no puede ingresar al análisis de fondo porque el accionante, lejos de
presentar la documentación en forma, de manera ordenada y correlativa con relación a las
afirmaciones que hace, por el contrario, pretendiendo o no burlarse de la justicia constitucional,
armó una especie de legajo de un proceso, reuniendo copias de distintos procesos, lo cual
resuelta irrazonable, más aún cuando éste tiene la obligación de probar los hechos que afirma y
documentar correctamente sus afirmaciones.

En consecuencia, el Juez de garantías al haber concedido la acción tutelar, no actuó


correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional, en su Sala Primera Especializada, en ejercicio de sus atribuciones


conferidas por imperio de la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art.
12.7 LTCP, en revisión resuelve: REVOCAR la Resolución de 1 de febrero de 2012 cursante de
fs. 89 a 90 vta., pronunciada por el Juez de Partido Mixto y de Sentencia de la localidad de
Ivirgarzama del departamento de Cochabamba; y, en consecuencia, DENEGAR la tutela
solicitada, con la aclaración que no se ingresó al análisis de fondo del problema jurídico
planteado.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0132/2012


Sucre, 4 de mayo 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00433-2012-01- AAC
Departamento: Pando

En revisión la Resolución de 7 de marzo de 2012, cursante de fs. 25 a 26 vta., pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional interpuesta por Humberto Choque Palombo contra
Henry Carmona Enriquez, secretario general del sindicato Mixto de Transporte “Perla del
Acre”

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memoriales de 1 y 3 de marzo de 2012, cursantes de fs. 6 a 7 y 15 y vta., el accionante


expone los siguientes fundamentos:

I.1.1. Fundamentos de hecho que la motivan la acción

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1041


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Señala el accionante que es propietario del vehículo con placa 2750 NFY de la línea “E” del
Sindicato de Transportes “Perla del Acre” y que el 22 de febrero de 2012, “Enrique” Carmona
Enriquez (demandado), Secretario General de dicho Sindicato, puso de manera verbal la
suspensión de servicio del vehículo sin razón alguna.

Añade que mediante oficio de 23 del mismo mes y año, solicitó al demandado le haga conocer
los motivos de dicha suspensión; sin embrago, en lugar de obtener una respuesta, una vez más,
el citado Secretario General del Sindicato de Transportes, en forma verbal dispuso también la
suspensión del servicio de su otro vehículo de la línea de trufis del Grupo “Los intocables”,
quedando hasta la fecha sin poder trabajar.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos de petición y al trabajo, citando al efecto los
arts. 24 y 47.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción y se reestablezca su derecho al trabajo.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 7 de marzo de 2012, en presencia del accionante y demandado,


asistidos ambos por sus abogados, según acta cursante de fs. 23 a 24 vta., se produjeron los
siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante ratificó el contenido de la acción interpuesta señalando que la actitud
del demandado es contraria al Estatuto y que al haber presentado una nota el “22 de marzo” (sic)
de 2012 no se le dio ninguna respuesta, vulnerando así su derecho de petición.

I.2.2. Informe del demandado

Henry Carmona Enriquez, de acuerdo con el informe de fs. 17 y vta., leído en audiencia, señala
que el 23 de febrero 2012, mediante carta se le invitó a solucionar el problema suscitado por la
vía de conciliación y especialmente para recomendarle que no incurra en actos como aquél en el
que incurrió; es decir, haberse presentado a trabajar en estado de ebriedad con el vehículo 2750
NFY, para hacer el recorrido de la línea “C”. Por otra parte, aclara que pese a la advertencia del
Jefe de Grupo el día en el que se presentó en estado de ebriedad, el accionante salió a trabajar
tras insultar al referido, lo que fue informado al Directorio que tomó la decisión de llamarle
severamente la atención. El accionado -añade- fue convocado en más de una ocasión y como no
se presentó, se determinó que mientras no firme un compromiso no se le permitiría ingresar a la
línea respectiva.

La determinación fue tomada forzados por la responsabilidad que se tiene de prestar un servicio
a la sociedad; que la entidad cuenta con Estatuto y Reglamentos y el accionante sabe que
conforme a dichas normas debe guardar respeto a su compañeros. Tras el suceso del 18 de
marzo de 2012 descrito en el informe, se convocó a una asamblea tras una reunión
extraordinaria de los jefes de grupo y se invitó al accionante con la finalidad de reflexionarle;
además, inmediatamente que se le llamó la atención verbalmente hizo llegar una nota
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1042
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cuestionando la suspensión que en realidad no era tal sino que él tenía que concurrir a la reunión
convocada y asumir el compromiso que se tenía redactado, cambiando su conducta y cumplir
con el Reglamento.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Civil, Social, de Familia y de la Niñez y Adolescencia del


Tribunal Departamental de Justicia de Pando, constituida en Tribunal de garantías, pronunció la
Resolución de 7 de marzo de 2012 cursante de fs. 25 a 26 vta., por la que se le concedió el
amparo solicitado, disponiendo la restitución de su derecho al trabajo que tiene el accionante en
la línea “E” de transporte de Trufis, con el fundamento de que el demandado suspendió al
accionante de su fuente laboral impidiendo la circulación del vehículo con placa 2750 NFY,
coartándole el derecho al trabajo sin que se le haya iniciado un proceso que garantice su derecho
a la defensa pues, el Estatuto y Reglamentos del Sindicato prevén “un sistema de régimen
disciplinario incompleto” (sic) donde se establecen las faltas y no el procedimiento ni las
personas competentes para juzgar y sancionar. Además, la suspensión sufrida por el accionante
no tiene causa ni justificativo específico.

II. CONCLUSIONES

Realizada la revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las siguientes conclusiones:


II.1. El 23 de febrero de 2012, Humberto Choque Palombo, mediante nota dirigida a Henry
Carmona, Secretario General del Sindicato “Perla del Acre”, solicita copia del Acta de la
reunión de 17 de febrero de 2012 y que se le otorgue certificación sobre cuál es el motivo de la
suspensión de su vehículo con placa de control 2750 NFY del Grupo “Lobos” y si la causal de
suspensión está prevista en el Estatuto o Reglamento (fs. 3).
II.2. Mediante nota de 26 de febrero de 2012, el Jefe de Grupo “Intocables”, señala que
Humberto Palombo quedó suspendido en sus actividades de trabajo por orden del Secretario
General del Sindicato (fs. 2).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos de petición y al trabajo, por cuanto el


demandado en su calidad de Secretario General del Sindicato Mixto de Transporte “Perla del
Acre” dispuso la suspensión de servicio del vehículo con placa de circulación 2750 NFY, y no
obstante que mediante nota solicitó conocer los motivos de la determinación, no obtuvo ninguna
respuesta; es más fue suspendido otro vehículo más de su propiedad, que presta también
servicios en otra línea. En revisión, corresponde dilucidar si los hechos expuestos por el
accionante son evidentes y si estos constituyen actos que lesionan los derechos invocados por el
accionante.

III.1. De la acción de amparo constitucional

Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la presente acción


tutelar elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a referida
acción de amparo constitucional instituida en el sistema constitucional boliviano; así, la
Constitución Política del Estado, en la Sección II, del Capítulo segundo (Acciones de Defensa)
del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte (Bases
fundamentales del Estado - derechos, deberes y garantías) ha instituido la acción de amparo
constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1043


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En ese marco, el art. 128 de la CPE, establece: “La Acción de Amparo Constitucional tendrá
lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona
individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos
reconocidos por la Constitución y la ley”; a su vez el art. 129.I de la CPE, determina que: “La
Acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a
su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la
Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados”.

En desarrollo de las normas constitucionales citadas, el art. 73 de la Ley del Tribunal


Constitucional Plurinacional (LTCP), al referirse al objeto de la acción de amparo
constitucional, dispone que: “(…) tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidas de
los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o
amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías reconocidos por la Constitución Política
del Estado y la ley” y, al referirse el art. 76 de la citada Ley, con relación a la subsidiariedad e
inmediatez, “La Acción de Amparo no procederá cuando exista otro medio o recurso legal para
la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados”.

La acción de amparo constitucional, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que


la Ley suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección cuyo objeto
es el restablecimiento inmediato y efectivo de los derechos y garantías restringidos, suprimidos
o amenazados, a través de un procedimiento judicial sencillo, rápido y expedito, frente a
situaciones de lesión provenientes de la acción u omisión de servidores públicos o particulares;
siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para
reparar la lesión producida.

III.2. Análisis del caso concreto

De la documentación que cursan en los antecedentes del expediente se tiene que el accionante
acudió ante el demandado, Secretario General del Sindicato “Perla del Acre”, a objeto de
solicitar que se le otorgue certificación sobre cual es el motivo de la suspensión de su vehículo y
si la causal de suspensión está prevista en el Estatuto o Reglamento, sin que el demandado
hubiera prestado certificación alguna y por el contrario, le habrían convocado a sostener una
reunión para que firme un compromiso -según expresa el demandado en el informe prestado-
evidenciándose que no hubo una respuesta formal como tampoco oportuna, más aún cuando de
lo que se trataba la petición estaba en torno a conocer las causas que le impedían prestar
servicios con su vehículo, en una de las líneas del Sindicato al que pertenece.

El art. 24 de la CPE, establece, que: “toda persona tiene el derecho a la petición de manera
individual o colectiva, sea oral o escrita, y a la obtención de respuesta formal y pronta”, y que,
“Para el ejercicio de este derecho no se exigirá más requisito que la identificación del
peticionario”; tal enunciado, coloca a la persona natural o jurídica, pública o privada, en la
obligación de responder de manera motivada al requerimiento o pretensión del peticionante,
positiva o negativamente, de modo que la misma pueda, en base a dicha respuesta, ejercer los
derechos subjetivos que crea le corresponde. Dicha respuesta, además, debe hacerse en un
tiempo oportuno o en aquél que establece la ley.

Por otra parte, y de acuerdo con lo manifestado por el demandado, efectivamente se suspendió el
servicio del vehículo de propiedad del accionante hasta que éste no suscriba un documento,
determinación que de hecho resultaría arbitraria en tanto y cuanto no existe evidencia que se
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1044
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

hubiera tramitado proceso administrativo alguno para tomar esa determinación o que exista una
norma que respalde la toma de dicha determinación, pues en el caso de examen, además, no se
acompañó los instrumentos normativos que regulan estos extremos; sin embargo, lo evidente es
que hubo la suspensión del servicio, extremo admitido por el demandante y que en todo caso
corresponde disponer sean restituidos los derechos del accionante.

El art. 46.II de la CPE, determina que: “El Estado protegerá el ejercicio del trabajo en todas sus
formas” así como el art. 47, que “Toda persona tiene derecho a dedicarse al comercio, la industria
o a cualquier actividad económica lícita, en condiciones que no perjudiquen al bien colectivo”. Así
sea cual fuere la forma de organización, en este caso gremial, de asociación de propietarios de
vehículos de servicio público, nadie, por propia voluntad y sin ningún sustento legal o normativo,
puede tomar decisiones a su arbitrio e impedir el ejercicio del trabajo de una persona; por lo mismo
cuando el demandado dispone la suspensión sin sujetarse a una norma que respalde su
determinación, al suspender que otra deje de ejercer un derecho, en este caso a prestar servicio de
transporte público, está lesionando su derecho al trabajo.

Con relación a que el accionado hubiera dado origen a la suspensión por haberse presentado al
trabajo en estado de ebriedad e incluso así salido a prestar un servicio público, constituye un deber
de todo ciudadano y más de los responsables dar parte a las autoridades competentes y en lugar de
“solucionar internamente tales denuncias” perseguir las sanciones que el orden normativo impone.

Por los fundamentos expuestos, el Tribunal de garantías, al haber concedido la tutela invocada,
obró correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art.
12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve:

1º APROBAR la Resolución de 7 de marzo de 2012, cursante de fs. 25 a 26 vta., pronunciada por


la Sala Civil, Social, de Familia y de la Niñez y Adolescencia del Tribunal Departamental de
Justicia de Pando; y, en consecuencia CONCEDER la tutela solicitada.

2º Disponiendo, además, que el demandado de respuesta a la petición formulada por el accionante.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0133/2012


Sucre, 4 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
00357-2012-01-AL
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1045
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 26/2012 de 2 de marzo, cursante de fs. 9 a 11, pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Edgar Andrés Barriga Valda contra
Ricardo Maldonado Aliaga, Juez Quinto de Instrucción en lo Penal del departamento
de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 29 de febrero de 2012, cursante de fs. 1 a 2, el accionante


expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso instaurado en su contra por la presunta comisión del delito de abuso
deshonesto previsto y sancionado en el art. 312 del Código Penal (CP), el 7 de noviembre de
2010, el entonces Fiscal de turno, presentó ante el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal,
imputación formal en su contra, solicitando de manera por demás infundada, la aplicación de
medidas cautelares, sin tomar en cuenta aspectos tales como que su persona jamás fue notificada
con denuncia o querella alguna, menos aún que haya sido encontrado en flagrancia, tal cual
señala el art. 230 del Código de Procedimiento Penal (CPP), concordante con el art. 23.IV de la
Constitución Política del Estado (CPE), desconociendo lo previsto por el art. 227 de la norma
procesal penal antes señalada, siendo en consecuencia indebidamente detenido por “personas
civiles”, sin que exista mandamiento librado por autoridad competente y sin considerar su
condición de persona de la tercera edad, extremos que fueron “comandados” (sic) por la abogada
Elizabeth Viscarra, como si esta fuera miembro del Ministerio Público o funcionario policial,
vulnerando sus garantías constitucionales contenidas en la “norma mater” (sic).

Refiere que, una vez detenido, en reiteradas oportunidades solicitó audiencia para la
consideración de la cesación a su detención preventiva, mismas que fueron suspendidas por
diversas causas; así, el 4 de julio de 2011, el Juez de la causa, conminó al Ministerio Publico a
presentar acusación o en defecto, alguna salida alternativa, sin embargo, dicha conminatoria no
fue respondida ni tomada en cuenta por más de siete meses, ocasionando notoria retardación de
justicia. En conclusión, asevera que se encuentra privado de su libertad por más de un año y tres
meses, sin tener acusación o salida alternativa en su caso.

I.1.2. Derechos y garantía supuestamente vulnerados

El accionante alega la lesión de “sus derechos constitucionales previstos en los arts. 115.I. II,
116.I y 117.I” (sic) de la CPE.

I.1.3. Petitorio

No expone un petitorio preciso y cabal; empero solicita, “señalar día y hora de Audiencia en la
que se fundamentará a detalle la acción interpuesta” (sic).

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1046


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En audiencia pública celebrada a horas 16:00 del 2 de marzo de 2012, conforme consta en el
acta cursante a fs. 8, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La parte accionante no se constituyó a la audiencia señalada al efecto.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Ricardo Maldonado Aliaga, Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, en el informe de fs. 6 a 7


vta., refirió lo siguiente: a) El “7 de noviembre de 2011”, el Fiscal de Materia Isabelino Gómez
Cervero, presentó resolución de imputación formal contra Edgar Barriga Valda, por la presunta
comisión del delito de abuso deshonesto y tentativa de violación, siendo la víctima una menor de
nueve años de edad; b) Mediante Resolución 385/2010 de “7 de noviembre de 2010”, se dispuso
la detención preventiva del imputado, en el recinto penitenciario de San Pedro de La Paz,
audiencia en la cual no alegaron aprehensión ilegal y mucho menos los hechos denunciados en
la presente acción de libertad; c) El 7 de enero de 2011, el ahora accionante pidió audiencia para
la consideración de la cesación a su detención preventiva, suspendida a solicitud de sus
abogados; d) El 14 de octubre del citado año, insistió en el pedido de audiencia, misma que se
señaló para el 9 de noviembre del mismo año; empero, en mérito a que su autoridad se
encontraba en un curso por disposición de la Corte Superior-ahora Tribunal Departamental- de
Justicia, fue suspendida hasta el 16 de diciembre de ese año, audiencia que también fue
pospuesta, debido a que no se notificó a la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y la
inasistencia del representante del Ministerio Público, señalándose nuevamente para 29 del
mismo mes y año, remitiéndose el expediente al juzgado de turno por fin de año, acta que no
cursa en actuados; e) Por memorial de 6 de enero de 2012, el imputado reiteró el señalamiento
de audiencia, dispuesta para el 16 enero de ese año, suspendida nuevamente por la inasistencia
del representante del Ministerio Público y abogado del imputado; f) Por Auto de 4 de julio de
2011, en virtud al art. 134 parte final del CPP, se conminó a la entonces Fiscal de Distrito a
presentar salida alternativa o requerimiento conclusivo; sin embargo, del informe emitido por
secretaría del Juzgado, se estableció que la notificación se efectuó el 23 de febrero de 2012; g)
No se vulneró derechos ni garantías constitucionales del imputado, más cuando tiene a su favor
el recurso de apelación, que no interpuso contra la Resolución de aplicación de medidas
cautelares; h) Conforme se tiene de antecedentes, el imputado “no presentó” ningún incidente
pendiente de resolver; i) De acuerdo a las SSCC 0160/2005-R, 0930/2010 y 0888/2010 y su
entendimiento modulado mediante la SC 0008/2010-R de 6 de abril, contra la Resolución que
dispone la aplicación medidas cautelares, corresponde el recurso de apelación, mismo que no ha
sido activado; y, j) Las suspensiones de audiencia de cesación a la detención preventiva del
ahora accionante, están debidamente justificadas, teniendo señalada audiencia el 5 de marzo de
2012.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituido en Tribunal
de garantías, pronunció la Resolución 26/2012 de 2 de marzo, cursante de fs. 9 a 11, por la que
concedió la tutela solicitada, disponiendo que dentro de las setenta y dos horas, la autoridad
demandada, verifique la audiencia pública de cesación a la detención preventiva del accionante,
advirtiendo que la admisión o el rechazo del pedido es exclusiva atribución de la misma; bajo
los siguientes argumentos de orden jurídico constitucional: 1) La autoridad demandada no sólo
está obligada a cumplir con el art. 54 del CPP, sino también, con el principio de celeridad
consagrado por los arts. 178 y 180 de la CPE, con relación al 3.7 de la Ley de Organización
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1047
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Judicial (LOJ), máxime si se encuentra en juego el valor libertad; 2) La celeridad se vulnera


cuando se omite desplegar injustificadamente la actividad procesal dentro de los términos que el
ordenamiento jurídico establece (SSCC 1042/2005-R y 0110/2004-R); y, 3) Se debe aplicar la
celeridad en trámites en los cuales esté de por medio la libertad, de lo contrario, se provoca la
restricción indebida de ese derecho (SC 0862/2005-R de 27 de julio 2005).

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Del informe emitido por el Juez Quinto de Instrucción en lo Penal, ahora demandado, se
estableció que: i) Isabelino Gómez Cervero, Fiscal de Materia, ahora demandado, dentro el
proceso penal iniciado a instancia del Ministerio Público contra Edgar Andrés Barriga Valda,
presentó imputación formal el 7 de noviembre de 2011, por la presunta comisión del delito de
abuso deshonesto y tentativa de violación, solicitando la detención preventiva del imputado;
disponiéndose, mediante Resolución 385/2010 de 7 de noviembre, la detención preventiva de
éste en el penal de San Pedro de La Paz; ii) Que, el 7 enero del mismo año, el imputado solicitó
audiencia de consideración de cesación a su detención preventiva, señalándose la misma para el
11 de febrero de ese año, suspendida a solicitud de los abogados del imputado; iii) El 14 de
octubre del referido año, el imputado volvió a pedir audiencia de cesación a su detención
preventiva, la que se dispuso para el 9 de noviembre del año arriba señalado, siendo nuevamente
suspendida en mérito a que, el Juez ahora demandado, se encontraría desarrollando un curso,
fijándose una nueva para el 16 de diciembre del mismo año, que también fue suspendida debido
a la falta de notificación de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y a la inasistencia del
represente del Ministerio Público, disponiéndose esta vez, para el 29 de diciembre de 2011 a
horas 10:30, circunstancias en las que se remitió actuados al juzgado de turno por fin de año,
señalando que no cursa en el expediente el acta correspondiente; iv) Finalmente, concluyó
señalando que por memorial de 6 de enero de 2012, el imputado, reiteró señalamiento de
audiencia pública para la consideración de la cesación a su detención preventiva, siendo fijada la
misma para el 16 de enero de ese año, suspendida por la inasistencia del representante del
Ministerio Público y abogado del imputado (fs. 6 a 7).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega que las autoridades demandadas vulneraron los derechos y garantías
contenidos en los arts. 115. I y II, 116.I y 117.I de la CPE, por cuanto dentro del proceso penal
tramitado en su contra por la presunta comisión del delito tipificado por el art. 312 del CP, se
encuentra detenido por más de un año y tres meses; en esta situación, solicitó en reiteradas
oportunidades, audiencia de consideración de cesación a su detención preventiva, mismas que
fueron suspendidas de manera injustificada.

III.1. La acción de libertad y su naturaleza jurídica

Previo a ingresar al análisis del caso concreto, es necesario introducir el tema referido a la
naturaleza jurídica de la acción de libertad, puesto que de dicha esencia se podrá determinar la
viabilidad o no de la presente demanda, labor que será cumplida a continuación.

La acción de libertad conocida en el derecho comparado y en nuestra legislación abrogada como


“recurso de habeas corpus”, encuentra fundamento en innumerables instrumentos normativos de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1048
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

orden internacional como en la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre,
Declaración Universal de Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, disposiciones normativas que forman parte del bloque de constitucionalidad, de
conformidad a lo dispuesto por el art. 410 de la CPE. Se trata de un mecanismo de defensa
constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la
protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la libertad física como de
locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o
indebidos por parte de servidores públicos o de personas particulares; así como a la vida, cuando
esté en peligro.

Esta garantía de carácter procesal constitucional, se encuentra consagrada en el art. 125 de la


CPE, donde dispone que: “Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal, podrá
interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera a su
nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en materia
penal, y, solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se restablezcan
las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”. Norma constitucional
concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), la cual
establece que su objeto es la garantía, protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad
física y a la libertad de locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de esos
derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o
supresión.

En tal sentido, debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está diseñada
sobre la base de dos pilares esenciales; el primero referente a su naturaleza procesal y el
segundo, compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que
configura el contenido esencial de esta garantía, es decir, su naturaleza procesal, se establece que
se encuentra revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada por
sus características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e inmediación;
procede contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no reconoce fueros ni
privilegios. Postulados que pueden ser inferidos de la norma constitucional antes referida.
Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se encuentra
configurado por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE, se resumen
en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la libertad
física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya procesamiento indebido;
y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida.

Teniendo presente que los supuestos fácticos descritos, planteados en la presente acción tutelar,
se refieren a la afectación del derecho a la libertad, corresponde a continuación abordar ese tema
en particular.

III.2. Validez, jerarquía normativa, obligatoriedad y transversalidad de los principios


constitucionales

El tribunal Constitucional Plurinacional en la SC 0112/2012 de 27 de abril, estableció que:


“(…)la validez normativa, jerarquía y obligatoriedad de las normas constitucionales-principios
en la Constitución de 2009, con relación a las normas constitucionales-reglas (el grueso de las
normas de la constitución) y de las primeras respecto de las normas legales-reglas (contenidas
en la leyes en sentido general sustantivas o procesales), si bien no tiene asidero en una norma
parecida a la contenida en el art. 229ª. de la Constitución abrogada que señalaba: Los
principios, garantías y derechos reconocidos por esta Constitución no pueden ser alterados por
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1049
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

las leyes que regulen su ejercicio ni necesitan de reglamentación previa para su cumplimiento, -
debido a que no existe un precepto constitucional explícitamente- su fundamento contundente
hay que encontrarlo en el carácter normativo-axiológico de la propia Constitución.

Un entendimiento en contrario significaría negar la base principista-axiológica de la propia


Constitución, sosteniendo que aquélla sólo tiene validez, jerarquía y es obligatoria respecto a las
normas constitucionales-reglas, porque la propia constitución así lo establece, afirmando que si la
propia Constitución no predica tal situación expresamente, carece de tal virtud.

Consecuentemente, las normas constitucionales-principios, establecidos en el texto


constitucional tienen validez normativa, prelación jerárquica y son obligatorias respecto a las
normas constitucionales-reglas y con mayor con relación a las normas legales-reglas
(contenidas en las leyes en sentido general sustantivas o procesales) por el sólo hecho de estar
inscritas en la Constitución, una Constitución ideada dentro del modelo de Estado
Constitucional, con todo lo que ello implica (Expediente 00198-2012-01-AL, Sala Penal
Tercera-Tribunal Constitucional Plurinacional).

III.3. La acción de libertad como medio de defensa idóneo ante la dilación indebida en
solicitudes de cesación a la detención preventiva

En el entendimiento desarrollado por la jurisdicción constitucional, a través de su labor


hermenéutica al respecto, estableció que: “(...) La solicitud de cesación a la detención preventiva
prevista por el art. 239 del CPP, está regida por el principio de celeridad procesal.

(…)

Bajo el entendimiento constitucional referido debemos partir señalando que, si bien no existe
una norma procesal legal que expresamente disponga un plazo máximo en el cual debe
realizarse la audiencia de cesación de detención preventiva; sin embargo, corresponde aplicar
los valores y principios constitucionales, previstos en el art. 8.II de la CPE, referido al valor
libertad complementado por el art.180.I de la misma norma constitucional, que establece que la
jurisdicción ordinaria se fundamenta en el principio procesal de celeridad, entre otros.

Bajo esa línea constitucional, debe entenderse que toda autoridad que conozca de una solicitud en
la que se encuentre involucrado el derecho a la libertad física, tiene el deber de tramitarla con la
mayor celeridad posible o dentro de los plazos razonables a la luz de los principios citados, pues
de no hacerlo podría provocar e incidir en una restricción indebida del referido derecho.

En este sentido, habrá lesión del derecho a la libertad física, cuando exista demora o dilación
indebida de una solicitud de tal naturaleza, vale decir, que si la solicitud es negada de acuerdo
a una compulsa conforme a ley no es ilegal siempre que esa negativa se la resuelva con la
celeridad que exige la solicitud” (SC 0161/2011-R de 21 de febrero).

Por otro lado, la SC 0579/2002 de 20 de mayo, citando las SSCC 0758/2000-R y 1070/2001-R,
entre otras, señaló: “…que el principio de celeridad procesal consagrado por el art. 116-X de la
Constitución Política del Estado, impone a quien administra justicia el deber jurídico de
despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones indebidas; exigencia que se
hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad personal, toda vez que tales
peticiones deben ser atendidas de forma inmediata si no existe una norma que establezca un
plazo, y si existe, debe ser cumplido estrictamente.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1050


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Que esta línea jurisprudencial es aplicable al caso de autos por cuanto la autoridad judicial
recurrida ha suspendido sin motivo alguno las audiencias señaladas para tratar y resolver la
cesación de detención preventiva solicitada por los recurrentes hace seis meses atrás, aduciendo
entre otros motivos la ausencia de la autoridad fiscal, cuya concurrencia no es imprescindible
para estas actuaciones. Que el Juez recurrido al no haber tramitado en forma inmediata y
oportuna la referida cesación de detención preventiva de conformidad con los arts. 239 y 240 del
nuevo Código de Procedimiento Penal, es evidente que ha demorado el trámite de manera
inadmisible, atentando contra la normativa citada así como contra el art. 116-X de la Constitución
Política del Estado y el derecho a la libertad de los recurrentes…”.

En ese orden, el Tribunal Constitucional, creando nueva jurisprudencia, mediante la SC


1010/2010-R de 23 de agosto, considera que existe acto dilatorio en el trámite de la cesación de
la detención preventiva, cuando:

“a) En lugar de fijar directamente la fecha y hora de la audiencia y notificar a las partes, se
dispongan traslados previos e innecesarios no previstos por ley.

b)Se fije la audiencia en una fecha alejada, más allá de lo razonable o prudencial. Plazo que
puede ser en un límite de tres o cinco días máximo, dependiendo de la particularidad de cada
caso, cuando por ejemplo existan varias partes imputadas o víctimas múltiples que tengan que
ser notificadas, o por la distancia donde se deba efectuar un determinado acto previo y esencial
-como sucede con algunas notificaciones-, o que el juzgado esté de turno, etc. Con la excepción
única y exclusiva en los casos que exista complejidad por la naturaleza propia y la relevancia
del proceso, como los derechos e intereses comprometidos y relacionados a la petición;
situación que deberá ser justificada por la autoridad judicial competente a momento de señalar
la fecha de audiencia, teniendo en cuenta la razonabilidad.

c) Se suspende la audiencia de consideración, por causas o motivos que no justifican la


suspensión, ni son causales de nulidad. Tal el caso de la inasistencia del representante del
Ministerio Público o de la víctima y/o querellante, si es que han sido notificadas legalmente y no
comparecen a la audiencia. En el caso del Ministerio Público al estar regido por el principio de
unidad tiene los medios para asistir a través de otro fiscal, y en cuanto al querellante al ser
coadyuvante y estar notificado, su participación es potestativa en dicho acto, y por ende, su
inasistencia no vincula a la autoridad jurisdiccional al estar cumplida la formalidad. No obstante,
en caso de que la suspensión se deba a la falta de notificación o a la inasistencia del propio
imputado, no existe dilación indebida ni afectación a derecho alguno, en cuyo caso deberá fijarse
nueva fecha de audiencia conforme a las directrices expuestas” (las negrillas nos corresponden).

En ese contexto, del contenido de las sentencias glosadas, queda establecido que la dilación
ante una solicitud de audiencia para la consideración de la cesación a la detención
preventiva, debe ser resuelta dentro el marco del principio de celeridad que exige la misma,
máxime si esta se encuentra vinculada directamente con el derecho de carácter primario
como es la libertad, que para su preservación requiere del Estado, la obligación de
viabilizar con la mayor efectividad su protección.

III.4. Principio de Unidad. La audiencia de cesación de detención preventiva, no puede


suspenderse por ausencia del Ministerio Público.

“En el marco procesal previsto por el Código de procedimiento penal, luego de la detención
preventiva impuesta como medida cautelar, se otorga la facultad al imputado de solicitar la
cesación de dicha medida con el requisito único de desvirtuar que: a) 'no concurren los motivos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1051
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que la fundaron o tornen conveniente que sea sustituida por otra medida', b) 'Cuando su
duración exceda el mínimo legal de la pena establecida para el delito que se juzga'; y c)
'Cuando su duración exceda de dieciocho meses sin que se haya dictado sentencia o de
veinticuatro meses sin que hubiera adquirido la calidad de cosa juzgada'.

Para resolver y compulsar si lo aseverado por la parte imputada es o no cierto y si corresponde


otorgar o no la cesación, el juez encargado del control jurisdiccional, deberá fijar la audiencia
dentro de un plazo razonable; empero, para el caso de ser imposible su realización por
cuestiones no sólo de orden formal sino que involucren posibles lesiones a derechos
fundamentales de la parte acusadora particular y del Ministerio Público, deberá asegurar que
estén notificados con el acto, y si pese a dicha notificación no se hacen presentes a la
celebración deberá desarrollarla indefectiblemente, pues la ausencia de los mismos importará
su aceptación a la solicitud, más aún si se trata del Ministerio Público, ya que éste en razón del
Principio de Unidad que le caracteriza puede asistir a la audiencia no siempre a través del
Fiscal asignado al caso sino a través de otro, si no lo hace, implica que renuncia a su derecho
a objetar la cesación, por lo mismo, el Juez deberá ser quien compulse si la parte imputada ha
demostrado con suficiente prueba que los elementos de juicio que fundaron la detención
preventiva ya no existen, pues de ser así deberá dar curso a la cesación, caso contrario deberá
negarla. SC 0873/2004-R de 8 de junio (las negrillas son añadidas).

En este sentido, queda establecido que en caso de la inasistencia del Fiscal a la audiencia fijada
para considerar la cesación de la detención preventiva, esta deberá ser desarrollada
indefectiblemente; pues, en observancia al principio de unidad que le caracteriza al Ministerio
Público, en ausencia del Fiscal asignado al caso, podrá concurrir otro en su representación,
situación por la cual el juzgador no podrá atribuir la suspensión de la audiencia por falta o
inasistencia del mismo.

III.5. Análisis del caso concreto

El accionante, refiere que se encuentra privado de su libertad por más de un año y tres meses,
por lo que, pidió al Juez de la causa ahora demandado, audiencia para la consideración de la
cesación a su detención preventiva, actuado procesal que a consecuencia de múltiples
suspensiones no fue instalada, constatando tanto de lo expuesto en la presente acción, como del
informe de la autoridad jurisdiccional, que la misma se fue dilatando por un lapso de tiempo por
demás considerable; en ese sentido, tomando en cuenta que la primera solicitud se la efectuó el 7
enero de 2011, no se la considera atentatoria a los derechos del accionante, pues, la suspensión
de la misma es estrictamente atribuible a la parte imputada; es así que a partir de la solicitud de
14 de octubre de ese año, se señaló audiencia para la consideración de la cesación a su detención
preventiva para el 9 de noviembre del mismo año, suspendida en atención a que la autoridad
jurisdiccional se encontraría desarrollando un curso, por disposición de la Corte Superior
del Distrito Judicial de La Paz, circunstancias en las que dispuso el señalamiento de una nueva
para el 16 de diciembre del indicado año, que reiteradamente fue suspendida debido a la falta de
notificación de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia y la inasistencia del representante
del Ministerio Público; no obstante el tiempo transcurrido, dispuso otra para el 29 de diciembre
del citado año. Reiterando lo expuesto por la autoridad demandada, luego de haber remitido el
expediente al juzgado de turno, ante un nuevo pedido de 6 de enero de 2012, fijó audiencia para
el 16 del mismo mes y año, que también fue suspendida por inasistencia del representante del
Ministerio Público y abogado del imputado. Con los antecedentes expuestos, se debe considerar
que las suspensiones a la solicitud de audiencia para la consideración de la cesación a su
detención preventiva, a partir del 14 de octubre de 2011, no fueron atribuibles a la parte que las
solicitó, siendo estos actos, considerados como atentatorios al principio de celeridad como
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1052
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

componente esencial del debido proceso; en ese contexto, el Juez Quinto de Instrucción en lo
Penal, a cargo del control jurisdiccional, fue postergando injustificada e indebidamente la
solicitud del imputado-ahora accionante-, por causas o motivos que no justifican la suspensión,
ya que al no señalar de manera inmediata y oportuna la audiencia para considerar la cesación de
su detención preventiva, atentó contra su derecho a la libertad; teniendo esta autoridad la
obligación de atender dicha pretensión con prontitud y con la mayor celeridad, resguardando un
derecho fundamental, tal cual lo expresa la amplia línea jurisprudencial desarrollada al respecto,
y más propiamente la citada en el Fundamento Jurídico III.3. de la presente Sentencia; por lo
que siendo evidente la dilación del trámite de manera inadmisible, vulnerando directamente el
derecho a la libertad del accionante, la autoridad jurisdiccional demandada, no procedió a la luz
de los principios reconocidos por la Constitución Política del Estado, siendo pertinente exhortar
que los jueces de instancia, al señalar una audiencia de cesación a la detención preventiva, deben
tomar las medidas oportunas a objeto de que estas no sean suspendidas sin causa justificada
alguna, y evitar perjuicios innecesarios a las partes y por ende al propio órgano jurisdiccional en
la labor de impartir justicia pronta y oportuna, correspondiendo en consecuencia, conceder la
tutela y aplicar la jurisprudencia citada en la presente Sentencia Constitucional.

Por otra parte, no obstante que el accionante denunció que el Juez de la causa, conminó al
representante del Ministerio Público a presentar acusación o en defecto alguna salida alternativa,
situación que no habría sido respondida ni mucho menos tomada en cuenta, ocasionando
retardación de justicia; argumentos que expuestos de esta manera, muestran que el caso no se
encuentra dentro de las previsiones y alcances de la acción de libertad, pues la protección que
brinda el art. 125 de la CPE, en cuanto al debido proceso se refiere, no abarca a todas las formas
en que el mismo puede ser infringido, sino únicamente en aquellos supuestos en los que está
directamente vinculado al derecho a la libertad, por operar como causa para su restricción o
supresión, quedando por tanto las demás, bajo la tutela que brinda el art. 128 de la CPE.

Finalmente, del informe prestado por la autoridad demandada, se constató que el ahora
accionante, se encontraría recluido en el recinto penitenciario de San Pedro de La Paz, por lo
que en estricta observancia del art. 68.5 de la LTCP, la Jueza, Juez o Tribunal de garantías deben
disponer que “…la o el privado de libertad sea conducido a su presencia sin observancia ni
excusa, tanto por la autoridad o persona denunciada como por los encargados de las cárceles o
lugares de detención”; sin embargo, en una errónea aplicación de la citada norma, el Tribunal de
garantías, mediante Resolución 26/2012, dispuso que “el Juzgado Quinto de Instrucción en lo
Penal de la ciudad de La Paz”, sea quien conduzca al privado de libertad a la audiencia, no
siendo pertinente, tal determinación.
Por los fundamentos expuestos, se concluye que el Tribunal de garantías al haber concedido la
acción de libertad, evaluó correctamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 26/2012 de 2 de
marzo, cursante de fs. 9 a 11, pronunciada por la Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental
de Justicia de La Paz, y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, en cuanto a la
dilación injustificada de la audiencia de cesación a la detención preventiva.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1053


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0134/2012


Sucre, 4 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00209-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión el Auto 67/12 de 13 de febrero de 2012, cursante de fs. 115 a 117 vta., pronunciada
dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Johan Echevarría Céspedes en
representación por mandato de Oscar Guillermo Mattaz Vásquez quien ejerce la
representación legal de la Organización no Gubernamental (ONG) Comunidad de Desarrollo
Integral Sostenible (CODIS) contra Margot Flores Lizarazu, Jueza Primera de Partido del
Trabajo, Seguridad Social y Administrativa, Coactivo Fiscal y Tributaria; y, Carlos Bernal
Tupa, Cesar Suárez Saavedra y Rodrigo Erick Miranda Flores, Vocales de la Sala Social y
Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Por memorial presentado el 26 de enero de 2012, cursante de fs. 15 a 19, el abogado apoderado por
la ONG accionante manifestó que dentro del proceso social seguido por Viviana Zeballos Saavedra
y otros, “la cosa juzgada dispuso” que la entidad demandada pague la suma total de Bs63 342,18.-
(sesenta y tres mil trescientos cuarenta y dos con 18/100 bolivianos), por concepto de beneficios
sociales debidos a todos los trabajadores demandantes; sin embargo, en ejecución de sentencia la
Jueza demandada dispuso se elabore nueva planilla de re cálculo de actualización de pago de
beneficios sociales en base a la variación de la Unidad de Fomento de Vivienda (UFV's) más el
pago de la multa del 30%, conforme lo dispuesto por el art. 9.II del Decreto Supremo (DS) 28699
de 1 de mayo de 2006, realizándose la misma cuyo cálculo irracional ascendería a la suma de
Bs107 152,05.- (ciento siete mil ciento cincuenta y dos con 05/100 bolivianos), error de cálculo
que contendría la planilla por haberse calculado el doble de multa por retraso.

Por lo indicado la ONG CODIS, observó dicha planilla advirtiendo a la Jueza el error, por haberse
calculado el doble de multa por retraso, pese a ello la autoridad judicial, por Auto de 11 de febrero
de 2011, aprobó el monto de la nueva planilla de re cálculo y actualización de beneficios sociales,
por lo que la entidad accionante interpuso recurso de apelación.

Los Vocales demandados, por Auto de Vista 276/2011 de 29 de agosto, confirmaron en todas sus
partes el Auto de 11 de febrero de 2011 y a consecuencia de ello la Jueza de primera instancia
mediante Auto de 1 de octubre de 2011, conminó a los representantes de la ONG CODIS, hacer el

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1054


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pago de los beneficios sociales en la suma de Bs107 152,05.-, bajo conminatoria de librar
mandamiento de apremio.

Las autoridades demandadas aprobaron y confirmaron la ilegal planilla de actualización de pago de


beneficios sociales, con Resoluciones carentes de toda motivación, sin explicar de forma coherente
ni objetivamente la inexistencia de un error de cálculo matemático en su elaboración. Omisión
indebida que a más de cohonestar el pago de lo indebido violenta la garantía del debido proceso en
su vertiente motivación del fallo.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

El abogado apoderado por la ONG accionante, considera vulnerado el derecho al debido proceso,
citando al efecto los arts. 115.II y 117.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita conceder la acción planteada, disponiendo en Resolución dejar sin efecto el Auto de 11 de
febrero de 2011, el Auto de Vista 276/2011 de 29 de agosto y el Auto de conminatoria de pago de
1 de octubre de 2011 y se ordene a la Jueza de primera instancia instruya que por Secretaría de su
Juzgado, se elabore una nueva planilla atendiendo los fundamentos expuestos.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 24 de febrero de 2012, ante la Sala Penal Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de Chuquisaca, según consta en el acta cursante de fs. 112-BIS a 114, se
produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado apoderado por la ONG accionante, se ratificó in extenso en los términos expuestos en
su memorial de interposición de la acción.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Margot Flores Lizarazu, Jueza Primera de Partido del Trabajo, Seguridad Social y Administrativa,
Coactivo Fiscal y Tributaria, informó que en el proceso social por pago de derechos y beneficios
sociales seguido contra la ONG CODIS, iniciado el 10 de agosto de 2006, tuvo como efecto la
Sentencia 040/2006 de 5 de octubre, Auto Definitivo de 12 de octubre de 2006, que calificó a favor
de los demandantes el pago de beneficios sociales en la suma de Bs64 302,18.- (sesenta y cuatro
mil trescientos dos con 18/100 bolivianos).

En apelación se dictó el Auto de Vista 591/2006, confirmando parcialmente la Sentencia, haciendo


una calificación en favor del demandante Luis Domingo Saavedra Macías. Recurriendo en
casación se emitió el Auto Supremo 516 que declaró infundado el mismo.

El 1 de noviembre de 2010, se inició la ejecución de autos, con la solicitud de facción de planilla


de re liquidación de beneficios sociales, aprobada por Auto de 11 de febrero de 2011, confirmado
en forma total mediante Auto de Vista 276/2011, ascendiendo a una suma total de Bs107 152, 05.-,
por Auto de 1 de octubre del mismo año, se conminó a la entidad demandada a su pago y los
demandados no ejercieron ningún recurso.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1055


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Carlos Bernal Tupa, Vocal de la Sala Social y Administrativa, refirió que luego de la revisión de la
planilla ya aprobada y que fue objeto de apelación, el Tribunal de alzada enmarcó su decisión
conforme al art. 9 del DS 28699. Además, el cálculo de la multa y la actualización, así como los
parámetros utilizados no hacen a la fundamentación no siendo un elemento del debido proceso.
Asimismo, la motivación exige una estructura de forma y fondo, que el Tribunal de apelación
cumplió en la Resolución que ahora se impugna; además, la parte accionante, no observó el monto
de la planilla ahora cuestionada.

Rodrigo Erick Miranda Flores, Vocal de la Sala Social y Administrativa, señaló que en mérito a la
reorganización de las Salas especializadas de ese Tribunal y no obstante al no intervenir en la Resolución
que propició la interposición de la presente acción, cumple con informar que esta acción de defensa no
constituye una instancia ordinaria más de revisión o de control de legalidad, como erradamente se
pretende al solicitar se proceda a realizar un nuevo cálculo respecto de los beneficios sociales.

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

Luis Domingo Saavedra Macías, Bruno Huarita Llanos y Viviana Zeballos, en su calidad de
terceros interesados, apersonándose alegaron que: a) Existe la debida motivación y
fundamentación de las Resoluciones impugnadas; b) El accionante no cumplió con la carga
argumentativa de vincular el hecho lesivo con los derechos vulnerados, no habiendo pedido la
excepción a la regla de la no interpretación de la legalidad ordinaria, solicitando se deniegue la
tutela con costas en su favor.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Primera, del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituido en


Tribunal de garantías, mediante Auto 67/12 de 13 de febrero de 2012, cursante de fs. 115 a 117
vta., denegó la acción de amparo constitucional, con el siguiente fundamento: 1) Adquiriendo
ejecutoria la Sentencia, se determinó el pago de beneficios sociales en favor de los demandantes y
que el cálculo base del monto actualizado a la fecha de liquidación se efectuó conforme a derecho,
por lo que la Jueza demandada obró correctamente al aprobar la planilla de liquidación; y, 2) Los
Vocales demandados que confirmaron la Resolución de primera instancia actuaron en el marco de
las disposiciones legales.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Apelada la Sentencia y Auto complementario por la entidad demandada -actualmente accionante-,
la Sala Social y Administrativa, mediante Auto de Vista 591/2006 de 9 de diciembre, confirmó
parcialmente la Sentencia apelada y Auto Definitivo 163 de 12 de octubre del mismo año (fs. 2 a 3 vta.).

II.2. Cursa Auto Supremo 516 de 6 de octubre de 2010, por el cual se declaró infundado el recurso
de casación interpuesto (fs. 4 a 5 vta.).

II.3. Por “PLANILLA DE RELIQUIDACIÓN DE BENEFICIOS Y DERECHOS SOCIALES,


CÁLCULO Y ACTUALIZACIÓN EN BASE A LA UNIDAD DE FOMENTO A LA VIVIENDA (u
f v s.)” de 11 de enero de 2011, se establece un monto total de Bs45 638,35.- (cuarenta y cinco mil
seiscientos treinta y ocho con 35/100 bolivianos), que debe cancelar la parte demandada, por
actualización y multa en base a la UFV y DS 28699, al margen del monto establecido por pago de
beneficios y derechos sociales fijados en Sentencia y Auto complementario (fs. 6 a 7 vta.).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1056
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.4. Por Auto de 11 de febrero de 2011, la Jueza demandada aprobó dicha planilla, aclarando que
se omitió sumar la multa del 30%, por lo que la suma total es Bs45 899,17.- (cuarenta y cinco mil
ochocientos noventa y nueve con 17/100 bolivianos) (fs. 8 y vta.).

II.5. Cursa memorial de interposición de recurso de apelación, presentado el 21 de julio de 2011,


solicitando se revoque el Auto de 11 de febrero de 2011 y se proceda hacer un nuevo cálculo
conforme el art. 9 del DS 28699 (fs. 9 a 10).

II.6. Por Auto 276/2011 de 29 de agosto, los Vocales de la Sala Social y Administrativa, confirmaron
totalmente el Auto de 11 de febrero de 2011 (fs. 11 a 12).

II.7. Por Auto de 1 de octubre de 2011, se conminó a la institución demandada cumplir con la Sentencia
040/2006, Auto de Vista 591/2006, la planilla y aprobación de la misma que asciende a la suma de
Bs107 152, 05.- (ciento siete mil ciento cincuenta y dos con 05/100 bolivianos), bajo conminatoria de
proseguirse en ejecución de autos y emitirse mandamiento de apremio (fs. 14 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El abogado apoderado por la ONG accionante, considera vulnerado el derecho al debido proceso,
por cuanto las autoridades demandadas dictaron Resoluciones sin motivación alguna, aprobando y
confirmando la planilla de re cálculo de actualización de pago de beneficios sociales; pero,
calculando el doble de la multa con retraso. En consecuencia, corresponde en revisión, verificar si
tales extremos son evidentes a fin de conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional es una acción tutelar de carácter extraordinario, cuya finalidad
es la protección de los derechos fundamentales de las personas, establecida en el art. 128 de la
CPE, procede: “…contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores públicos, o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley”.

A su vez, el art. 129.I de la CPE, enfatiza que esta acción tutelar puede presentarse por la persona:
“…que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad
correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre
que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías
restringidos, suprimidos o amenazados”.

Pese a ello la acción de amparo constitucional se activa, previo cumplimiento por parte del
accionante de los requisitos de forma y de contenido, establecidos para la presentación de la
demanda en esta acción de defensa, ello para que el Tribunal Constitucional Plurinacional pueda
efectuar un pronunciamiento de fondo.

III.2. Legitimación pasiva de autoridades y servidores públicos que dejaron la titularidad del
cargo

La SC 0158/2002-R de 27 de febrero, entendió que la legitimación pasiva es la: “…la capacidad


jurídica otorgada al funcionario público o persona particular para ser recurrido en impugnación
de su acto, decisión u omisión que lesiona los derechos o garantías constitucionales de una
persona…” y que conforme a la SC 0691/2001-R de 9 de julio, dicha: “…calidad que se adquiere
por la coincidencia que se da entre la autoridad que presuntamente causó la violación a los
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1057
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derechos y aquélla contra quien se dirige la acción…”, en este sentido el sujeto con legitimación
pasiva en un amparo constitucional es de suma importancia, debe estar previamente identificado
por el accionante en el memorial de demanda, ya que se constituye en un requisito de forma en la
etapa de admisibilidad (art. 77.2 de la Ley del Tribunal constitucional Plurinacional [LTCP]), para
así activar la jurisdicción constitucional, “...sin que el señalamiento del sujeto pasivo de la tutela
resulte de la libre elección del actor...” (SC 0711/2005-R de 28 de junio).

Dentro de un proceso constitucional, en la tramitación de una acción de amparo constitucional, ya


sea el mismo ante un juez o tribunal de garantías o en revisión ante el Tribunal Constitucional
Plurinacional, no es posible excusar el cumplimiento del debido proceso en su elemento del
derecho a la defensa de la autoridad o persona demandada, sobre todo cuando a través de esta
acción tutelar se busca la protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales,
entre las cuales está justamente este derecho que también debe ser observado en la justicia
constitucional.

Ahora bien, a consecuencia del resultado que pudiera devenir de esta acción tutelar, se podría
determinar la responsabilidad civil e inclusive penal de la autoridad demandada, que no podría
imponerse si ésta no tuvo la posibilidad de ejercer ampliamente su derecho a la defensa,
comenzando con el primer acto procesal de su notificación y cumplir así la finalidad de poner en su
conocimiento las pretensiones del accionante.

Pese a lo señalado, existe en la jurisprudencia constitucional, en virtud al principio pro actione y en


general por irradiación del derecho de acceso a la justicia, diferentes excepciones, es así que ante
un corte de agua en una urbanización, decisión adoptada por todo el directorio pero donde solo se
demandó al Presidente del Directorio, se aceptó legitimación parcial del demandado (SC
0953/2006-R de 2 de octubre) o cuando el órgano colegiado se compone de muchas personas es
posible demandar únicamente a su representante (SC 0447/2010-R de 28 de junio).
Respecto a las autoridades públicas demandadas la SC 0371/2006-R de 18 de abril,
sostuvo:“...corresponde dirigir el recurso de amparo constitucional contra la persona individual o
personas individuales que cometieron el acto ilegal, sin perjuicio de que en casos excepcionales la
demanda se dirija contra el funcionario que accedió al cargo en forma posterior de haberse
cometido el acto ilegal, sólo a efecto de la responsabilidad institucional...”.

En cuanto a la responsabilidad institucional de nuevas autoridades la SC 0264/2004-R de 27 de


febrero, estableció que: “…la demanda debe estar dirigida contra la 'autoridad' que ostente el
cargo desde el cual se realizó el acto ilegal o se incurrió en la omisión indebida, sin que ello
implique que, en caso de existir responsabilidades personalísimas, como la penal, el funcionario
que haya accedido al cargo con posterioridad al acto lesivo de derechos, tenga que asumir las
consecuencias únicamente por encontrarse en funciones al momento de iniciarse la demanda y
porque ésta haya sido dirigida en su contra'”, es decir, debe entenderse que a la autoridad que
ejerce el cargo del cual emergió el acto ilegal u omisión indebida únicamente le corresponde la
responsabilidad institucional, entendida como una situación jurídica derivada de una acción u
omisión que lesiona derechos fundamentales y garantías constitucionales, por lo cual el funcionario
asume por la institución a la cual representa, el deber de cesar la restricción, supresión o amenaza
de restringir o suprimir los derechos fundamentales y garantías constitucionales. En cambio, la
responsabilidad personal, es la asumida por el que lesionó de forma directa ya sea con sus actos
ilegales u omisiones indebidas derechos fundamentales y garantías constitucionales, de lo cual
podría devenir no sólo la responsabilidad civil sino la penal, a efectos de la reparación del daño
causado, por lo que en el nuevo orden constitucional deberá considerarse lo establecido en el art.
112 de la CPE, tratándose de delitos cometidos por servidores públicos que atenten contra el
patrimonio del Estado y causen grave daño económico.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1058
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De lo anterior:

1. Conforme lo establecido por la SC 0264/2004-R, es posible el planteamiento de la demanda contra la


actual autoridad; es decir, la que se encuentra actualmente en el ejercicio del cargo, pero sólo a efectos de
una responsabilidad institucional y no así de una de carácter personal, esto porque en esencia a través de
la acción de amparo constitucional se busca la protección de derechos fundamentales y garantías
constitucionales y la declaración de responsabilidad constitucional se constituye en una consecuencia de
la otorgación de la tutela.

2. A momento de considerar la legitimación pasiva de autoridades públicas en razón a cambios


continuos de la administración pública es posible demandar contra el cargo o la función pública en
cuyo ejercicio pudieron cometerse los actos violatorios denunciados, al no ser atinente a la
voluntad del accionante el cambio de servidores públicos, por ello tampoco sus derechos pueden
quedar en suspenso por el cambio de autoridades y servidores públicos.

En el caso concreto, el accionante presentó la acción de amparo constitucional contra los Vocales
de la Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca,
autoridades judiciales que al momento de dictar la Resolución impugnada -Auto 276/2011 de 29 de
agosto-, desempeñaban esas funciones, particularmente contra el vocal César Suárez Saavedra y
que por el informe presentado por el vocal Rodrigo Erick Miranda Flores, se evidencia que en
mérito a una reorganización de las Salas especializadas de ese Tribunal y pese a no intervenir en el
fallo ahora cuestionado, ostenta la legitimación pasiva, conforme a la jurisprudencia desarrollada,
quien no asumirá las consecuencias que pudieran devenir en una responsabilidad constitucional,
porque en realidad lo que se busca a través de esta acción de amparo constitucional no es
determinar la responsabilidad sino la protección contra las lesiones y amenazas a los derechos
fundamentales y garantías constitucionales.

Ahora bien, si la regla señala que, cuando el funcionario o autoridad ya no ocupa el cargo en el que
se encontraba cuando ocasionó la lesión al derecho o garantía, el accionante debe dirigir su
demanda contra la persona que actualmente ostente el cargo. Excepcionalmente, al no ser conocido
por parte del accionante el cambio de autoridad, no le es imputable ese hecho, por lo que al dirigir
la acción de amparo constitucional únicamente contra la autoridad anterior, no incumplió con uno
de los requisitos exigidos para la activación de esta acción de defensa, teniendo legitimación pasiva
la autoridad que actualmente ostenta el cargo del cual devino el cuestionado acto ilegal u omisión
indebida.

En consecuencia, se tendrá por cumplido el requisito exigido en el art. 77.2 de la LTCP, que refiere
que la acción de amparo constitucional será presentada por escrito indicando el nombre y domicilio
de la parte demandada, ya que el demandante dirigió su acción contra la autoridad que firmó y
dictó el Auto que ahora es objeto de la presente acción de defensa y la nueva organización interna
realizada, respetando el principio de la seguridad jurídica que debe existir en la administración de
justicia, no tendría por qué perjudicar el derecho de acceso a la justicia que tiene el accionante.

III.3. Requisitos de admisibilidad en la acción de amparo constitucional

Cabe mencionar previamente, que la jurisprudencia constitucional desarrollada respecto a los


requisitos de admisión de forma y de contenido, estaba conforme a la normativa de la Ley 1836 de
1 de abril de 1998 -Ley del Tribunal Constitucional- por lo que es necesario una adecuación
conforme al nuevo orden constitucional vigente y la Ley 027 de 6 de julio de 2010 -Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional-, siendo que los mismos son de inexcusable cumplimiento
por parte del accionante en la presentación de la acción de amparo constitucional y los efectos ante
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1059
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

su inobservancia en la etapa de admisión, así como en revisión ante este Tribunal, por cuanto, para
solicitar la protección de los derechos y garantías constitucionales a través de la presente acción
tutelar conforme estableció la SC 0365/2005-R de 13 de abril, con referencia a éstos,
estableció:“… del cumplimiento de los mismos depende que tanto el Tribunal de amparo como
este Tribunal, en revisión, puedan compulsar sobre la base de criterios objetivos, la legitimación
de las partes, así como la veracidad de los hechos reclamados y los derechos vulnerados, para en
definitiva otorgar o negar el amparo solicitado, a su vez tiende a garantizar también que con tales
precisiones puedan estar a derecho para asumir defensa en debida forma”; siendo que, ante el
cumplimiento de los mismos se activa la justicia constitucional a través de esta acción tutelar,
evitando de esta forma el inicio de un procedimiento constitucional que carezca de los elementos
de juicio básicos necesarios para decidir sobre la problemática jurídica planteada.

En el nuevo marco constitucional vigente, conviene referir previamente a lo establecido en el art.


77 de la LTCP, que dispone que la presentación de la acción de amparo constitucional deberá ser
por escrito y observando los siguientes requisitos de forma y de contenido:

1. Acreditar la personería del accionante.


2. Indicar el nombre y domicilio de la parte demandada, o de su representante legal y el de los terceros
interesados.
3. Exponer con claridad los hechos.
4. Identificar los derechos o garantías que se consideren vulnerados.
5. Acompañar la prueba en que funda su Acción o indicar el lugar en que se encuentra; en este
último caso la jueza, juez o tribunal, al momento de disponer la citación de la persona o autoridad
accionada, ordenará a quien corresponda presentar la prueba señalada, bajo responsabilidad;
6. Fijar con precisión la tutela que se solicita para restablecer los derechos o garantías
restringidos, suprimidos, amenazados o vulnerados.

En consecuencia, siguiendo la jurisprudencia constitucional y aplicando el art. 77 de la LTCP,


tenemos que los requisitos de forma son los establecidos en los numerales 1, 2 y 5, siendo
subsanables y los requisitos de contenido son los referidos en los numerales 3, 4 y 6 de dicha
norma, cuya inobservancia ante un juez o tribunal de garantías conlleva a un rechazo in límine.

La SC 2225/2010-R de 19 de noviembre, refirió que:“… se concluye que el accionante interpuso la


presente acción, sin cumplir con los requisitos de contenido (…), cuya inobservancia, debió merecer el
rechazo in límine por el Tribunal de garantías; sin embargo, al haber sido admitido, pese a los defectos
señalados que resultan insubsanables, corresponde declarar su improcedencia, puesto que se
imposibilita analizar el fondo de la problemática planteada, toda vez que al Juez o Tribunal de
garantías, así como a este Tribunal, le es imprescindible conocer los hechos motivantes del mismo y su
conexión con los derechos y garantías invocados de vulnerados, para formar una convicción clara y
precisa sobre la lesión de los mismos, cuya mínima fundamentación exige una relación clara de
causalidad entre ambos y no el simple relato de los hechos…”, del entendimiento jurisprudencial
desarrollado se establece que ante la admisión de una acción de amparo constitucional pese a la
inobservancia de los requisitos de contenido por parte del juez o tribunal de garantías, en revisión ante el
Tribunal Constitucional Plurinacional, corresponde denegar la tutela ante la imposibilidad de un análisis
de fondo de la problemática jurídica constitucional planteada.

III.4. Análisis del caso concreto

En el caso concreto, dentro del proceso social seguido contra la ONG accionante, por Auto de 1 de
octubre de 2011, se conminó a la institución demandada cumplir con la Sentencia 040/2006 de 5 de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1060


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

octubre, Auto de Vista 591/2006 de 9 de diciembre, la planilla y aprobación de la misma que


asciende a la suma de Bs107 152, 05.

El abogado apoderado por la ONG accionante a través de su acción de amparo constitucional alega
que las autoridades demandadas, primeramente la Jueza de primera instancia, al haber dispuesto se
elabore planilla de re cálculo de actualización de pago de beneficios sociales, en base a la variación
de las UFV's más el pago de la multa del 30% sobre el total de los beneficios sociales conforme
dispone el art. 9.II del DS 28699, razón por la cual se elaboró una nueva en base a la actualización
en UFV's y la multa por retraso, ascendiendo a la suma exorbitante de Bs107 152,05.- como monto
total por beneficios sociales a ser pagados por la entidad demandada en el proceso social seguido
en su contra, alegando que dicho cálculo sería irracional, con un manifiesto error de cálculo en la
planilla, habiéndose calculado en su criterio el doble de la multa por retraso, por lo que se observó
ésta, advirtiendo a la Jueza que aún así fue confirmada por los Vocales de la Sala Social y
Administrativa, que de esa forma cohonestaron el pago de lo indebido, violentando el debido
proceso en su vertiente motivación del fallo.

De un análisis del expediente, respecto al requisito de contenido referido a exponer con precisión
los hechos contenidos en el art. 77.3 de la LTCP se establece que el abogado apoderado de la
entidad accionante, en su demanda únicamente se limitó hacer una relación de los supuestos
hechos ilegales, indicando que las autoridades demandadas actuaron contrariamente a la norma
legal y que existía error matemático de la planilla de re cálculo (se efectúo el doble de la multa del
30%) y actualización de beneficios sociales; pero, a la vez hace referencia a un error en el método
o procedimiento del cálculo sosteniendo que sobre el monto determinado por la entonces Corte
Suprema de Justicia debió sacarse el 30% y luego la actualización de UFV's y no como lo hicieron;
es decir, primero las UFV's y luego la multa, aspecto que no implicaría un error matemático sino
de método pero a la vez alega una incorrecta interpretación del DS 28699, la misma fue aprobada
por la Jueza de primera instancia y confirmada por el Tribunal de alzada; pero, no explicó en que
consistía el error de cálculo, ni tampoco justificó cómo afectaría la supuesta multa doble, que es
una operación de carácter estrictamente matemática, a la debida fundamentación del fallo, tampoco
el supuesto error en el procedimiento de cálculo aplicado para obtener el monto total; también,
concluyen que la interpretación del Decreto Supremo debió ser en forma diferente a las autoridades
demandadas evidenciándose la poca claridad en la demanda de la acción de amparo constitucional.

Además, que en la presente acción el demandante se refirió al método de cálculo realizado en la


elaboración de la planilla; pero, sin argumentar respecto de cual sería la forma correcta de realizar la
misma y cómo debió aplicarse el art. 9 del DS 28699.

Asimismo, respecto al requisito de precisar con claridad el petitorio en el marco del punto anterior,
dicha indeterminación en la exposición de motivos se traduce en el petitorio de la demanda de amparo
en razón a que el art. 77.3 y 6 de la LTCP, referentes a exponer los hechos y fijar con exactitud la tutela
que se pide para restablecer los derechos o garantías restringidos, suprimidos, amenazados o vulnerados;
se pide dejar sin efecto el Auto de 11 de febrero de 2011, Auto de Vista 276/2011 de 29 de agosto y
Auto de conminatoria de pago de 1 de octubre del mismo año y que se ordene a la Jueza de primera
instancia instruya que por Secretaría de su Juzgado se elabore una nueva planilla, no guarda relación con
el derecho acusado de vulnerado y por ende se pida se corrija el error y el procedimiento de cálculo o la
interpretación de la norma, incumpliendo así la exigencia de señalar con precisión la tutela que se solicita
en razón a que el Tribunal Constitucional Plurinacional no puede otorgar más de lo pedido. Por lo
manifestado previamente, debió haberse rechazado in limine la presente acción de defensa y no haberse
admitido la misma, activando innecesariamente la justicia constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1061


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Aplicando la línea jurisprudencial vigente, en el caso concreto ante la admisión de la presente acción
de amparo constitucional, por parte del Tribunal de garantías, pese a la inobservancia en el memorial
de demanda, de los requisitos de contenido, corresponde al Tribunal Constitucional Plurinacional en
revisión denegar la tutela solicitada, ante la imposibilidad de un análisis de fondo de la problemática
jurídica constitucional planteada, pudiendo la entidad accionante volver a interponer esta acción de
defensa, cumpliendo lo extrañado en la presente.

En consecuencia el Tribunal de garantías al denegar la acción tutelar, ha actuado correctamente,


aunque con otros fundamentos.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve:

1º APROBAR el auto 67/12 de 13 de febrero de 2012, cursante de fs. 115 a 117 vta., pronunciada
por la Sala Penal Primera, del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca; y en
consecuencia DENEGAR la tutela solicitada.

2º Llamar la atención al Tribunal de garantías, por no realizar un correcto análisis de los requisitos de
admisibilidad y no haber rechazado in limine la presente acción, por inobservancia de requisitos de
contenido, activando innecesariamente esta jurisdicción constitucional.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez .-Magistrada.


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0135/2012


Sucre, 4 de mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00199-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 24 de febrero de 2012 cursante de fs. 177 a 180 vta., pronunciada dentro
de la acción de amparo constitucional interpuesta por Edgar Hinojosa Bustillos en representación
con mandato de Laura Bustillos Montaño contra José Mario Gandarillas Angulo, Juez Cuarto
de Partido en lo Civil y Comercial del departamento de Cochabamba.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 14 de febrero de 2012, a horas 8:24, cursante de fs. 163 a 168 vta.,
el accionante por su representada expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1062
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Se inició una demanda sumaria persiguiendo el cobro de Bs 22 202.- (veintidós mil, doscientos dos
bolivianos), contra Javier Orellana Goytia, adjuntando como base de la demanda un documento
privado transaccional de 11 de marzo de 2011, la Jueza Primera de Instrucción en lo Civil del
departamento de Cochabamba, señaló audiencia de conciliación, en la que se llegó a un acuerdo
voluntario entre partes; pronunciando el Auto de 17 de agosto de 2011, que a la letra dice: “Los
puntos conciliados por las partes, se aceptan los mismos, otorgándole a la presente acta de
conciliación el valor de una sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada conforme a mandato de
Ley” (sic), firmando como signo de aceptación y en constancia de lo acordado, el demandante Edgar
Hinojosa Bustillos en representación sin mandato de Laura Bustillos Montaño, Javier Orellana Goytia
y la Jueza y Actuaria del Juzgado correspondiente.

En esa misma fecha después de celebrada la audiencia, la Jueza de la causa, dictó Resolución
disponiendo que la actuaría de su despacho se constituya en el domicilio de Laura Bustillos Montaño
(quien se encontraba postrada en cama debido al accidente de tránsito que ocasionó el demandado),
para que suscriba el acta de conciliación. Dicha determinación, fue cumplida el 25 de agosto de 2011.

Después de haber transcurrido más de 25 días de efectuada el acta de conciliación, el demandado


Javier Orellana Goytia representado mediante poder especial y suficiente por Esperanza del Carmen
Sanjinés Nogueira y Teresa León Chambi plantearon un incidente de nulidad del acta de conciliación
por infracción a normas procesales, el mismo fue resuelto por la Jueza de la causa mediante Auto
Interlocutorio de 22 de septiembre de 2011, que declaró improbado dicho incidente.

Los representantes de Javier Orellana Goytia, interpusieron recurso de apelación mediante memorial
de 3 de octubre de 2011 contra el Auto Interlocutorio de 22 de septiembre de 2011, recurso que fue
resuelto por el Juez Cuarto de Partido en lo Civil y Comercial mediante Auto de Vista de 27 de enero
de 2012, revocando la Resolución recurrida y declarando probado el incidente de nulidad del acta de
conciliación.

El accionante por su representada señaló que, el Juez de Partido Cuarto en lo Civil y Comercial ahora
demandado, mediante Auto de Vista de 27 de enero de 2012, revocó ilegalmente el Auto
Interlocutorio de 22 de septiembre de 2011, en virtud de los arts. 59. II y 90 del Código de
Procedimiento Civil (CPC), vulnerando las garantías constitucionales del debido proceso y la tutela
judicial efectiva.

Asimismo, señaló que el Auto Interlocutorio anulado, tenía el valor de sentencia pasada en autoridad
de cosa juzgada conforme al mandato de ley, y el Juez demandado contravino lo dispuesto por los
arts. 514 y 517 del CPC. Señalando los principios de nulidad del proceso: de legalidad, de
convalidación, de finalidad; y, tampoco se respetó la autonomía de las partes para celebrar el acuerdo
conciliatorio.

Indica, que si existió alguna duda sobre el consentimiento de la afectada y víctima Laura Bustillos
Montaño, ésta fue subsanada por la Jueza Primero de Instrucción en lo Civil, al disponer que la
afectada suscriba el acta de conciliación, sin objeción de la parte demandada.
Finaliza indicando que se vulneraron las garantías constitucionales del debido proceso y la tutela
judicial efectiva, vinculadas a la seguridad jurídica.

I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1063


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El accionante denuncia la vulneración de los derechos de su representada y garantías


constitucionales del debido proceso y a la tutela judicial efectiva vinculados al principio de la
seguridad jurídica, citando al efecto los arts. 115 y 128 de la Constitución Política del Estado
(CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita la nulidad del Auto de Vista de 27 de enero de 2012, dictado por el Juez Cuarto de
Partido en lo Civil y Comercial, y se disponga que la autoridad demandada pronuncie nueva
resolución en forma inmediata.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

La audiencia pública se realizó el 24 de febrero de 2012, a horas 9:00, según consta en el acta
cursante a fs. 176 y vta., produciéndose los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante por su representada, en audiencia mediante su abogado se ratificó en los


fundamentos de su demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

José Mario Gandarillas Angulo, Juez Cuarto de Partido en lo Civil y Comercial, presentó
informe cursante de fs. 174 a 175 vta., manifestando lo siguiente: a) Habiendo conocido su
autoridad el recurso de apelación contra el Auto Interlocutorio de 22 de septiembre de 2011,
pronunciado por la Jueza Primera de Instrucción en lo Civil, dictó el Auto de Vista el 27 de
enero de 2012 revocando el Auto de 22 de septiembre de 2011, declarando la nulidad del acta de
conciliación; y, b) Asimismo sostuvo que el Auto de Vista se circunscribió a los puntos
resueltos por la Jueza a-quo conforme el art. 236 del CPC, señalando que el hecho de que luego
del acta de conciliación se hubiera dictado el Auto definitivo en el que se aceptaron los puntos
conciliados y se otorgó al acta de conciliación el valor de sentencia pasada en autoridad de cosa
juzgada. Lesionándose lo dispuesto por el art. 59. II del CPC que indica: “Si el principal no se
hiciere presente hasta antes de la sentencia, se tendrá por inexistente lo actuado, condenándose al
representante al pago de costas y en su caso al de daños y perjuicios“, además se lesionó el art. 90
del mismo cuerpo legal que consagra el cumplimiento obligatorio de las normas procesales que
tiene carácter público. Solicitando se deniegue la acción impetrada.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El abogado de Javier Orellana Goytia señaló: 1) Que plantearon incidente de nulidad al acta de
audiencia de conciliación de 17 de agosto de 2011, por irregularidades cometidas en el proceso,
el mismo fue rechazado dando lugar a la apelación, tomando conocimiento el Juez Cuarto de
Partido en lo Civil y Comercial, quien revocó la Resolución apelada y declaró nulo el acta de
conciliación; y, 2) Advertimos que el accionante, tenía conocimiento de la representación sin
mandato, y al llegar al estado de conciliación que es una forma extraordinaria de conclusión del
proceso y la resolución que salga, tiene la calidad de sentencia con autoridad de cosa juzgada.
Consecuentemente, la aplicación de lo dispuesto por el art. 59.II del CPC, resulta imperativo
para su validez, solicitando se deniegue la tutela demandada declarando improcedente la
presente acción.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1064


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.4. Resolución

La Sala Civil Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba constituida en


Tribunal de garantías, pronunció la Resolución de 24 de febrero de 2012, cursante de fs. 177 a
180 vta.; “denegando la tutela demandada”, declarando improcedente la acción de amparo
constitucional.

La Resolución se basa en los siguientes fundamentos: i) Por Auto de Vista de 27 de enero de


2012, el demandado revocó el Auto apelado, declarando probado el incidente de nulidad de acta
de conciliación, al no haberse dado estricto cumplimiento a lo dispuesto por el art. 59.II del
CPC, que dispone: “Si el principal no se hiciere presente hasta antes de la sentencia, se tendrá
por inexistente lo actuado, condenándose al representante al pago de costas y en su caso al de
daños y perjuicios”, que no puede ser convalidada por el acta labrada por actuaría el 25 de
agosto de 2011, donde se infiere que el accionante, da por bien hecho todo lo actuado, posterior
al valor de la sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada, lesionando el mencionado artículo
y por consiguiente el art. 90 del mismo cuerpo legal, además que el propio demandante en su
memorial de demanda pide se lo tenga en calidad de representante sin mandato con la protesta
de que su madre antes de la resolución dará por bien hecho lo actuado, situación incumplida por
la parte y no valorada por el Juez a quo; ii) Aclarando que por la vía de la acción de amparo
constitucional no se puede ingresar a valorar pruebas que sirvan de base para resoluciones
judiciales o administrativas, ni la certeza ni equívoco de las mismas, pues no puede convertirse
en una instancia procesal de casación o recurso superior jerárquico, toda vez que de deferirse la
misma se estaría desvirtuando la esencia misma de la tutela demandada y legislada, señalando
jurisprudencia constitucional de las SSCC 1473/2003-R, 1358/2003-R y 829/2001-R; y, iii)
Respecto a la cosa juzgada señaló la SC 0561/2003-R de 29 de abril, el Tribunal Constitucional
ha sentado jurisprudencia en el sentido de que: ”…cuando una resolución ilegal afecta el
contenido esencial de un derecho fundamental, no se puede sustentar su ilegalidad bajo la
supuesta cosa juzgada en cuyo caso se abre el ámbito de aplicación del Amparo Constitucional
previsto en el art. 19 de la Ley Fundamental (SSCC 1315/2002-R y 1446/2001-R),
consecuentemente, aclaró que existen formalidades procesales que cumplir, por lo que no se
acreditó la vulneración de derecho alguno por parte del accionante ni conculcado el debido
proceso, mucho menos el de la seguridad jurídica.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes, se llega a las conclusiones que se
señalan seguidamente:

II.1. Por memorial de 6 de mayo de 2011, cursante de fs. 24 a 26, se inició la demanda sumaria
persiguiendo el cobro de la suma de Bs. 22. 202.-, seguida por Edgar Hinojosa Bustillos en
representación sin mandato de Laura Bustillos Montaño contra Javier Orellana Goytia, radicado en el
Juzgado Primero de Instrucción en lo Civil, adjuntando como base de la demanda un documento
privado transaccional de 11 de marzo del mismo año.

II.2. De fs. 66 a 67 vta., cursa acta de audiencia de conciliación de 17 de agosto de 2011, llegando a
acuerdos entre partes, la Jueza Primera de Instrucción en lo Civil, pronunció el Auto de 17 de agosto
de 2011, otorgando a la antes señalada el valor de sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada.
Posteriormente, la Jueza dictó otro Auto el 17 del mismo mes y año cursante a fs. 68, disponiendo que
la actuaria del Juzgado se constituya en el domicilio de la afectada, Laura Bustillos Montaño, y
suscriba el correspondiente acta de conciliación, acto que no se realizó hasta el 25 de agosto de ese
año.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1065
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.3. De fs. 78 a 82, cursa memorial de 12 de septiembre de 2011, por el cual, Esperanza del Carmen
Sanjines Nogueira y Teresa León Chambi en representación de Javier Orellana Goytia, interponen
incidente de nulidad del acta de conciliación por la presunta infracción a normas procesales, dictando
la Jueza, el Auto de 22 de septiembre de 2011 cursante de fs.87 a 88, declarándola improbada.

II.4. De fs. 91 a 96 vta., cursa memorial de 3 de octubre de 2011, por el cual las representantes de
Javier Orellana Goytia, interponen recurso de apelación al Auto de 22 de septiembre de 2011.
II.5. De fs. 158 a 159, cursa Auto de Vista de 27 de enero de 2012, dictado por el Juez Cuarto de
Partido en lo Civil y Comercial, manifestando que la Jueza a quo realizó errónea interpretación de la
norma vigente, refiriéndose a los artículos 59.II y 90 del CPC, dictando se revoque el Auto de 22 de
septiembre de 2011, declarando probada la nulidad del acta de audiencia de conciliación, interpuesta
por las representantes de Javier Orellana Goytia.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante sostiene que la autoridad judicial demandada, al dictar el Auto de Vista de 27 de enero
de 2012, vulneró los derechos y garantías constitucionales del debido proceso y a la tutela judicial
efectiva vinculados al principio de seguridad jurídica, por cuanto revocó y dispuso la nulidad del
acta de conciliación de 17 de agosto de 2011; ya que mediante Resolución de 22 de septiembre de
2011, la Jueza Primera de Instrucción en lo Civil declaró improcedente el incidente de nulidad del
acta de conciliación mencionada, a pesar de que la misma adquirió calidad de cosa juzgada. En
consecuencia, corresponde analizar en revisión, si tales argumentos son evidentes a fin de
conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. Naturaleza Jurídica de la acción de amparo constitucional.

La acción de amparo constitucional, ha sido instituida por la Constitución Política del Estado en
sus arts. 128 y ss., como una medida de defensa de los actos u omisiones ilegales o indebidos de
los servidores públicos, derechos que son reconocidos por la misma Ley Fundamental y que son
inherentes a todos los estantes y habitantes del Estado Plurinacional de Bolivia.

Cabe señalar que la Constitución Política del Estado en su Capítulo Segundo, acciones de
defensa, contempla la acción de amparo constitucional en su art. 128 que indica: “La Acción de
Amparo Constitucional tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los
servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen
restringir o suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley” (sic), el art. 129
señala que: “La acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea
afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de
acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados” (sic).

III.2.La aplicación del principio de legalidad

El principio de legalidad es fundamental para el Derecho Público, pues mediante éste principio,
es que el ejercicio del poder público, se somete a la Constitución Política del Estado y a las
leyes. Solo un verdadero Estado de Derecho, es respetuoso de la Constitución y las leyes,
encontrando en ellas su límite. Ningún poder público, puede estar excluido del respeto y
sometimiento a la Norma Suprema y las leyes. Este principio, es cimiento de la seguridad
jurídica, por ello su importancia. Asimismo, su asidero constitucional se encuentra en el art. 410
de la CPE refrendando la supremacía constitucional como la cúspide del ordenamiento jurídico
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1066
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

boliviano y la jerarquía normativa correspondiente, a la cual todos los Órganos o Poderes del
Estado deben someterse. En tal sentido, el principio de legalidad, es la aplicación objetiva de la
ley, propiamente dicha, a los casos en que deba aplicarse. Evitando así una libre interpretación o
aplicación caprichosa de la norma.

Así, la SC 0258/2011-R de 16 de marzo, estableció: “La nueva perspectiva del principio


constitucional de legalidad, importa una visión más amplia y a la vez compatible con la
evolución del Derecho Constitucional; en su concepción, se debe comprender como la directriz
maestra que informa a todo el sistema normativo -positivo y consuetudinario-; el deber de
conocer, cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes, previsto en el art. 108.1 CPE,
precisa este principio, debiendo entenderse, que la legalidad informadora deviene de la Ley
Suprema del ordenamiento jurídico es decir, que el principio de legalidad contiene en su matriz
normativa al principio de constitucionalidad. Es su carácter esencial y generador el que
condiciona la cobertura y relación respecto: 1. A otros principios constitucionales informadores
-ya sean generales o específicos-; 2. A las normas fundamentales -incluidas las del bloque de
constitucionalidad- y leyes constitucionales; 3. A principios infra constitucionales; y 4. A las
normas legales infra legales”.

En tal caso, deberá valorarse si efectivamente, el Juez ahora demandado, actuó conforme el
principio de legalidad para determinar si se vulneró el derecho de la accionante.

III.3. Interpretación de la legalidad ordinaria, corresponde a la justicia constitucional


verificar si no se han quebrantado los principios informadores del ordenamiento jurídico

Con carácter previo al análisis de fondo de la problemática planteada, es necesario reiterar que la
jurisprudencia constitucional, con referencia al alcance de la acción de amparo constitucional, en
similares casos en los que se exigía a la jurisdicción constitucional examinar la interpretación
realizada por la ordinaria -de normas jurídicas-, estableció que la labor interpretativa de las
normas legales ordinarias le corresponde a los jueces y tribunales ordinarios; sin embargo, se
estableció el canon de constitucionalidad en esa interpretación, manifestando la siguiente
doctrina jurisprudencial conforme la SC 1846/2004-R que señala "Si bien la interpretación de la
legalidad ordinaria debe ser labor de la jurisdicción común, corresponde a la justicia
constitucional verificar si en esa labor interpretativa no se han quebrantado los principios
constitucionales informadores del ordenamiento jurídico, entre ellos, los de legalidad,
seguridad jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y debido proceso;
principios a los que se hallan vinculados todos los operadores jurídicos de la nación; dado que
compete a la jurisdicción constitucional otorgar la protección requerida, a través de las
acciones de tutela establecidas…”.

Esto significa, que los órganos de la jurisdicción ordinaria deben sujetar su tarea interpretativa a
las reglas admitidas por el derecho, que exige que tal labor se realice partiendo de una
“interpretación al tenor de la norma (interpretación gramatical), con base en el contexto
(interpretación sistemática), con base en su finalidad (interpretación teleológica) y, los estudios
preparatorios de la ley y la historia de formación de la ley (Interpretación histórica)” (Cfr.
Cincuenta años de jurisprudencia del Tribunal Constitucional Alemán, pág. 19); reglas o
métodos de interpretación que en algunas legislaciones, han sido incorporados al ordenamiento
jurídico positivo (así, art. 3.1 del Código Civil Español).

Las reglas de la interpretación aludidas, operan como barreras de contención o controles,


destinadas a precautelar que a través de una interpretación defectuosa o arbitraria, se quebranten
los principios constitucionales aludidos; de modo que debe ser previsible, tanto en relación a los
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1067
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

medios empleados cuanto en relación al resultado alcanzado; pues la interpretación de una


norma no puede conducir a la creación de una norma distinta de la interpretada.
En este orden, conviene precisar “que la interpretación sistemática o contextualizada, puede
extenderse, según los casos, al artículo del cual forma parte el párrafo o inciso analizado; al
capítulo o título al que pertenece; al sector del ordenamiento con el que se vincula o pertenece;
o al ordenamiento en su conjunto; y finalmente, de manera inexcusable, con las normas,
principios y valores de la Constitución, dado que de todas las interpretaciones posibles que
admita una norma, debe prevalecer siempre aquella que mejor concuerda con la Constitución”
(SC 1846/2004-R de 30 de noviembre).

“Por consiguiente, para que este Tribunal ingrese a la interpretación de revisión de la


legalidad ordinaria, la parte procesal, que se considera agraviada con los resultados de la
interpretación, porque lesionan sus derechos fundamentales, exprese de manera adecuada y
precisa los fundamentos jurídicos que sustenten su posición, fundamentos en los que deberá
exponer con claridad y precisión los principios o criterios interpretativos que no fueron
cumplidos o fueron desconocidos por el juez o tribunal que realizó la interpretación y
consiguiente aplicación de la norma interpretada; asimismo, exponer qué principios
fundamentales o valores supremos no fueron tomados en cuenta o fueron desconocidos por el
intérprete al momento de desarrollar la labor interpretativa y asumir la decisión impugnada;
pues resulta insuficiente la mera relación de hechos o la sola enumeración de las normas
legales supuestamente infringidas; porque sólo en la medida en que el recurrente expresa
adecuada y suficientemente sus fundamentos jurídicos la jurisdicción constitucional podrá
realizar la labor de contrastación entre la interpretación legal realizada por la jurisdicción
ordinaria y los fundamentos que sustentan la interpretación y las conclusiones a las que arribó,
con los fundamentos y pretensiones expuestos por el recurrente del amparo constitucional”. Así
la SC 0718/2005-R de 28 de junio, entre otras.

“Conforme a ello, y atendiendo a que la jurisdicción constitucional sólo puede analizar la


interpretación efectuada por los jueces y tribunales ordinarios cuando se impugna tal labor
como irrazonable, es necesario que el recurrente, en su recurso, a tiempo de cuestionar la
interpretación de la legalidad ordinaria: 1. Explique por qué la labor interpretativa impugnada
resulta insuficientemente motivada, arbitraria, incongruente, absurda o ilógica o con error
evidente, identificando, en su caso, las reglas de interpretación que fueron omitidas por el
órgano judicial o administrativo, y 2. Precise los derechos o garantías constitucionales que
fueron lesionados por el intérprete, estableciendo el nexo de causalidad entre éstos y la
interpretación impugnada; dado que sólo de esta manera la problemática planteada por el
recurrente, tendrá relevancia constitucional” (Entendimiento asumido en la SC 0085/2006-R de
25 de enero).

III.4. Análisis del caso concreto y si amerita la tutela constitucional

En el presente caso, se debe señalar que a pesar de existir autorestricciones para que la justicia
constitucional pueda ingresar al análisis de la interpretación ordinaria, se evidencia que el
accionante cumplió con dichos requisitos; empero, no sólo basta reunir estos requisitos para que
se declare procedente una acción, sino que ello, permite que este Tribunal pueda ingresar a
valorar dicha interpretación y concluir si la misma fue correcta o incorrecta.

De esta manera, dentro de la demanda sumaria, sustanciada en el Juzgado Primero de


Instrucción en lo Civil, se llevó a cabo la audiencia de conciliación de 17 de agosto de 2011,
dictándose el Auto de misma fecha, dándole el valor de sentencia pasada en autoridad de cosa
juzgada; sin embargo, no es menos cierto que la Jueza recién y con posterioridad a la emisión de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1068
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

dicho Auto y posterioridad a la suscripción del acta de conciliación, dispuso que la actuaria de
su despacho se constituya en el domicilio de la ahora representada para que suscriba el acta de
audiencia y se de cumplimiento a lo prescrito por el art. 59.II del CPC.

Por consiguiente, si bien el accionante denunció la vulneración de los derechos de su


representada, manifestando que las transacciones siempre que sean válidas, tienen entre las
partes y sus sucesores, los efectos de la cosa juzgada; empero, las normas procesales son de
orden público y de cumplimiento obligatorio, las estipulaciones contrarias serán nulas como
ocurre en el presente caso, ya que no se dio estricto cumplimiento a lo previsto por el art. 59.II
del CPC que señala: “Si el principal no se hiciere presente hasta antes de la sentencia, se tendrá
por inexistente lo actuado…”.

De lo que se colige, que no se aplicó correctamente las normas establecidas por nuestro
ordenamiento jurídico, al emitirse el Auto conciliatorio. De esta manera, se debe indicar que
cuando no se cumplen las normas procesales, se lesionan las reglas del debido proceso y se vicia
de nulidad el acto procesal que no nace a la vida jurídica, lo que obliga a reparar y declarar la
nulidad de las actuaciones conforme el art. 90 del CPC.

De lo analizado, se concluye que los Vocales de la Sala Civil Segunda, resolvieron en forma
fundamentada la apelación emergente presentada por el accionante, que a criterio de este
Tribunal, no ha existido un apartamiento de los marcos legales; en consecuencia, no se ha
derivado en la vulneración de los derechos de la parte accionante, ni conculcado el debido
proceso y mucho menos la seguridad jurídica; motivo por el cual, no puede concederse la tutela
solicitada mediante la presente acción de amparo constitucional.

Finalmente, se debe señalar que dentro de la acción, la misma es emergente de la inobservancia


de la ley, realizada por Clelia La Fuente Torrico, Jueza Primera de Instrucción en lo Civil; que, a
consecuencia de sus resoluciones, la parte accionante se vio perjudicada en sus pretensiones del
cobro de dinero a Javier Orellana Goytia, quien en accidente de tránsito causó lesiones
gravísimas a la madre del accionante, y que a través del error procedimental, se evitó que el
accionante pudiera cobrar y recuperar todos los gastos en los que tuvo que incurrir para la
curación de su madre, a pesar de existir el compromiso de pago por parte de Javier Orellana
Goytia, que hasta la fecha no canceló el dinero comprometido.

Toda vez que, se evidencian aspectos de índole penal, como lesiones gravísimas, y ante el
conocimiento de cualquier Órgano del Estado, las mismas pueden ser denunciadas ante el
Ministerio Público, el Tribunal Constitucional Plurinacional, puede en su caso instruir se
remitan los antecedentes para la correspondiente averiguación de los hechos.

Por los fundamentos expuestos, el Tribunal de garantías al “denegar” la acción de amparo


constitucional, ha actuado en forma correcta.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional en su Sala Primera Especializada; en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve:

1º APROBAR la Resolución de 24 de febrero de 2012, cursante de fs. 177 a 180 vta.,


pronunciada por la Sala Civil Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Cochabamba
constituido en Tribunal de garantías y, en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1069
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

2º Instruir al Consejo de la Magistratura investigue y en su caso inicie proceso por las


actuaciones de la Jueza Primera de Instrucción en lo Civil, Clelia La Fuente Torrico.

3º Póngase en conocimiento del Ministerio Público el presente caso, toda vez que se constató la
existencia de lesiones gravísimas provocadas por Javier Orellana Goytia contra la víctima Laura
Bustillos Montaño, debiendo para el efecto el Tribunal de garantías realizar los actuados
necesarios para dicho fin.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0136/2012


Sucre, 4 de mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relatora: Soraida Rosario Chánez Chire
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00145-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución de 17 de febrero de 2012, cursante de fs. 20 a 23 vta., pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional interpuesta por Ricardo Padilla Espinoza contra Wilson
Canaviri Gamboa, Presidente de la Organización Territorial de Base (OTB) Zona Sud de
Colcapirhua.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 2 de febrero de 2012, cursante de fs. 7 a 9, el accionante expresa los
siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El accionante, manifiesta que habiendo cambiado de domicilio hace más de seis meses, de la
calle Mirlos (antes alcoleria) a la vivienda ubicada en la calle Sucre, final Colcapirhua;
asimismo, teniendo conocimiento de la aplicación de una multa de Bs 2000.- (dos mil
bolivianos), solicitó la condonación de la misma y la regularización de pagos para el traslado de
la conexión domiciliaria de agua a su nueva vivienda; no habiendo recibido respuesta alguna a
su petición, el 30 de noviembre del 2011 y 18 de enero del 2012, reiteró su solicitud al
Presidente de la OTB, ahora demandado, pero a la fecha de presentación de la acción no existe
respuesta a sus reiteradas solicitudes, está privado del elemento vital para la vida y la salud
(agua), viéndose obligado a comprar el mismo de los carros cisternas.

Por consiguiente, considera que el Presidente de la OTB, al no haber respondido a su solicitud


de traslado de conexión de agua potable ha vulnerado sus derechos a la petición y al agua.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1070
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Denuncia la vulneración de sus derechos a la vida, al agua, a la petición, consagrados por los
arts. 15.I, 16.I, 20.I y III y 24 de la Constitución Política del Estado (CPE); 3 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos (DUDH), 1 de la Declaración Americana de Derechos
Humanos; 6.1. del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; y, 4.1 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la tutela y se disponga la inmediata conexión domiciliaria del servicio de


agua potable en su domicilio. Con costas, daños y perjuicios.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de febrero del 2012, según consta en el acta cursante a fs.
19 y vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado accionante ratificó los términos expuestos en la acción de amparo constitucional.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

El demandado no concurrió a la audiencia, tampoco presento informe escrito pese a su legal


citación, por lo que la misma se llevó, en su ausencia.

I.2.3. Resolución

El Juzgado Segundo de Partido de la Familia Niñez y Adolescencia de Quillacollo, pronunció la


Resolución de 17 de febrero del 2012, cursante de fs. 20 a 23 vta. denegando la acción de
amparo constitucional formulada por Ricardo Padilla Espinoza contra Wilson Canaviri Gamboa,
con los siguientes argumentos: a) La petición, no ha sido dirigida a la autoridad municipal tal
cual prescribe el espíritu de la Ley de Municipalidades, reclamando un derecho a la vida
humana, a la salud y a la alimentación; b) Respecto a la supuesta vulneración del derecho a la
conexión de agua potable, no ha acreditado su derecho propietario, o en que calidad se encuentra
viviendo en dicho domicilio, lo que impide determinar si materialmente han existido los hechos
denunciados, por lo que existe duda razonable sobre el derecho propietario; c) Respecto a la
vulneración del derecho a la petición, se tiene como antecedentes las literales presentadas por el
accionante, sin respuesta alguna por parte de la autoridad a quien se encuentra dirigida, por lo
que corresponde aplicar la SC 1843/2011-R, con referencia a la línea jurisprudencial asumida en
cuanto al silencio administrativo negativo y su relación con el derecho a la petición, pues se
tiene señalado que la falta de respuesta, sea positiva o negativa, a una solicitud dentro el ámbito
administrativo (sea a nivel gubernamental u otro en el que las normas administrativas las
alcance: Ley de Municipalidades, Ley de Procedimientos Administrativos; Ley 2066, etc.), no
constituye una vulneración al derecho de petición, máxime si por mandato legal el silencio
administrativo constituye una respuesta a lo solicitado, por lo que la regla de la subsidiaridad
contenida en el art. 6 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP) no ha sido
superada; d) En cuanto a la tutela que solicita el accionante, que es la inmediata conexión
domiciliaria del servicio de agua potable en su domicilio, por competencia y jurisdicción de un
Tribunal de garantías, no corresponde, toda vez que solamente puede disponer la tutela y
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1071
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

restitución de derechos y garantías constitucionales; ordenar una inmediata conexión


domiciliaria corresponde a otras instituciones; y, e) El pago de costas, daños y perjuicios, se da
en ejecución de sentencia y una vez otorgada propiamente dicha tutela o restitución de derechos
y garantías constitucionales.

II. CONCLUSIONES

Del análisis de la documental adjunta al expediente, se evidencia:

II.1. A fs. 5, se evidencia la solicitud de traslado de acción de agua potable de 1 de enero del
2009, dirigida al señor Nelson Gallinete, ex Presidente de la Junta Vecinal de la Zona Sud de
Colcapirhua.

II.2. A través de la solicitud de 18 de agosto del 2011, el accionante hace entrever que procedió
al traslado de la instalación al predio ubicado en la parte final de la calle Sucre, tras una solicitud
realizada al ex Presidente de la OTB, la que no fue atendida, tomando a consecuencia
conocimiento de la existencia de una multa de Bs 2000.-, por no contar con la autorización para
el traslado, por lo que solicita la condonación de la multa y manifiesta su disponibilidad para
regularizar el pago por el traslado de dicha acción (fs.4).

II.3. El 30 de noviembre del 2011, el accionante reiteró su solicitud de traslado de su “acción de


agua” de la calle innominada Alcoleria a la calle final Sucre, por motivos de cambio de
domicilio (fs. 3).

II.4. Mediante memorial de 18 de enero del 2012, el accionante, requiere traslado y reposición
del servicio de agua potable en su domicilio ubicado en la calle final Sucre, en vista de que
hubiera sido cortado, de manera arbitraria e ilegal por un grupo de vecinos (fs. 2).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, arguye que se le ha vulnerado los derechos a la petición, al agua y a la vida, por
cuanto el demandado -Presidente de la OTB Zona Sud de Colcapirhua- no ha atendido sus
reiteradas solicitudes de traslado de su “acción de agua” a su nuevo domicilio, por lo que en
consecuencia se le estuviera privando de este servicio.

En consecuencia, corresponde en revisión verificar si tales extremos son evidentes a fin de


conceder o denegar la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional

La acción de amparo constitucional está prevista por el art. 128 de la CPE la misma establece
que:” La Acción de Amparo Constitucional tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o
indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan,
supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la
ley”.

A su vez, el art. 129.I de la CPE, refiere que esta acción tutelar “…se interpondrá por la persona
que se crea afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad
correspondiente de acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente,
siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección inmediata…”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1072


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De acuerdo a lo mencionado, la acción de amparo constitucional se configura como una garantía


jurisdiccional extraordinaria, que hace posible la materialización de los derechos fundamentales
consagrados en la Constitución Política del Estado y las leyes, cuando éstos son restringidos,
suprimidos o amenazados de restricción y supresión por parte de particulares o funcionarios
públicos y siempre que no hubiere otro medio o recurso legal para su protección; es decir, que
esta acción se activa cuando no existen otros medios o vías idóneas para otorgar la tutela
solicitada.

III.2. El derecho a la petición: Contenido y requisitos

Relativo al derecho de petición, actualmente consagrado por el art. 24 de la CPE, el mismo


establece que: “Toda persona tiene derecho a la petición de manera individual o colectiva, se
oral o escrita, y a la obtención de respuesta formal y pronta. Para el ejercicio de este derecho no
se exigirá más requisito que la identificación del peticionario”.

La SC 1148/2002-R de 19 de septiembre, respecto al derecho de petición consagrado por el art.


7 inc. h) de la Constitución Política del Estado abrogada, establecía que, debe entenderse el
mismo como esa facultad o potestad que tiene toda persona para dirigirse, individual o
colectivamente, ante las autoridades o funcionarios públicos, lo que supone el derecho a obtener
a una pronta resolución, ya que sin la posibilidad de exigir una respuesta rápida y oportuna
carecería de efectividad el derecho.

La SC 0275/2003-R de 11 de marzo, ha establecido, que el mismo es un derecho fundamental


del ser humano, consiste en esa facultad que tiene toda persona de dirigirse a las autoridades
públicas con el fin de reclamar, pedir u observar alguna cosa que le incumbe a aquella,
caracterizado como un instrumento de particular importancia para que la sociedad civil pueda
controlar a sus autoridades y hacer valer sus derechos y que el núcleo esencial de este derecho
fundamental comprende la respuesta pronta y oportuna.

Según la jurisprudencia mencionada, se concluía que por regla general el derecho de petición
sólo era oponible o tenía como sus destinatarios a las autoridades públicas o a quienes ejercen
autoridad-potestad de mando o decisión.

Asimismo, respecto al derecho de petición el Tribunal Constitucional, en su SC 0355/2011-R de


7 de abril, la misma que alude a la SC 0571/2010-R de 12 de julio ha establecido: “El art. 24 de
la CPE, sostiene que: 'Toda persona tiene derecho a la petición de manera individual o
colectiva, sea oral o escrita, y a la obtención de respuesta formal y pronta. Para el ejercicio de
este derecho no se exigirá más requisito que la identificación del peticionario'; así también la
SC 0310/2004-R de 10 de marzo, estableció que: '…en caso de alegarse la violación del
derecho a formular peticiones, corresponde que el recurrente, demuestre los siguientes hechos;
a) la formulación de una solicitud expresa en forma escrita; b) que la misma hubiera sido
formulada ante una autoridad pertinente o competente; c) que exista una falta de respuesta en
un tiempo razonable; y, d) se haya exigido la respuesta y agotado las vías o instancias idóneas
de esa petición ante la autoridad recurrida y no existan otras vías para lograr la pretensión`”.

Empero, mediante SC 1995/2010-R de 26 de octubre, se moduló la SC 0571/2010-R de 12 de


julio, señalando que: “…el primer requisito señalado por dicha Sentencia, es decir, la
formulación de una solicitud en forma escrita no es exigible, pues la Constitución expresamente
establece que la petición puede ser escrita u oral.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1073


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Con relación al segundo requisito que establece que la solicitud debe ser presentada ante
autoridad competente o pertinente, se debe precisar que ésta no es una exigencia del derecho de
petición, pues aún cuando la solicitud se presente ante una autoridad incompetente, ésta tiene la
obligación de responder formal y oportunamente sobre su incompetencia, señalando, en su
caso, a la autoridad ante quien deber dirigirse el peticionario; conclusión a la que se arriba por
el carácter informal del derecho a la petición contenido en la Constitución Política del Estado,
que exige como único requisito la identificación del peticionario, y en la necesidad que el
ciudadano, encuentre respuesta y orientación respecto a su solicitud, en una clara búsqueda
por acercar al administrado con el Estado, otorgándole a aquél un medio idóneo para obtener
la respuesta buscada o, en su caso, la información sobre las autoridades ante quienes deber
acudir, lo que indudablemente, fortalece el carácter democrático del Estado Boliviano”.
“(…)Respecto al tercer requisito, el mismo es compatible con el texto de la Constitución
vigente, pues sólo si en un plazo razonable, o el plazo previsto por las normas legales -si
existiese- no se ha dado respuesta a la solicitud se tendrá por lesionado el derecho a la petición.

Finalmente, el cuarto requisito, referido a que el peticionante debe haber reclamado una
respuesta y agotado las vías o instancias idóneas de esa petición ante la autoridad recurrida,
corresponde señalar que dicho requisito es exigible cuando dichos medios de impugnación
estén previstos expresamente en el ordenamiento jurídico con dicho objetivo, es decir,
resguardar el derecho de petición; a contrario sensu, no será exigible cuando no existan esos
medios; pues, se entiende que este derecho -como se tiene señalado- busca acercar al
administrado al Estado, otorgando a la persona de un instrumento idóneo, expedito e inmediato
para acudir ante el servidor público con la finalidad de requerir su intervención en un asunto
concreto o de solicitar una determinada información o documentación que cursa en poder de
esa autoridad”

Consecuentemente, para que dicha justicia constitucional ingrese al análisis de fondo de la


presunta lesión al derecho de petición, es exigible: 1. La existencia de una petición oral o
escrita; 2. La falta de respuesta material y en tiempo razonable a la solicitud y 3. La
inexistencia de medios de impugnación expresos con el objetivo de hacer efectivo el derecho
de petición” (las negrillas son nuestras).

III.2.1. EL derecho de petición ante particulares

Anteriormente, según la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, se concluía que por regla
general el derecho de petición sólo era oponible o tenía como sus destinatarios a las autoridades
públicas o a quienes ejercen autoridad-potestad de mando o decisión.

Sin embargo, en la jurisprudencia comparada, el Tribunal Constitucional de Colombia en su


Sentencia T-730/01 de 5 de julio, ha establecido: “El derecho de petición frente a entidades
privadas, no ha sido reglamentado por el legislador, no obstante, la Corte ha establecido los
parámetro generales para determinar su procedencia, dentro de los lineamientos de un Estado
Social y Democrático de Derecho, distinguiendo tres situaciones a las cuales se les otorga
diferentes grados de protección:

La Corte ha considerado que cuando el derecho de petición se formula ante particulares, es


necesario separar tres situaciones: 1.Cuando el particular presta un servicio público o cuando
realiza funciones de autoridad. El derecho de petición opera igual como si se dirigiera contra la
administración. 2. Cuando el derecho de petición se constituye en un medio para obtener la
efectividad de otro derecho fundamental, puede protegerse de manera inmediata. 3. Pero, si la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1074


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tutela se dirige contra particulares que no actúan como autoridad, este será un derecho
fundamental sólo cuando el legislador lo reglamente…”.
Asumiendo este entendimiento, a la luz de la Constitución Política del Estado, los Convenios y
Tratados Internacionales la doctrina y la legislación comparada, la SC 1366/2004-R de 19 de
agosto, ha establecido parámetros que determinan la procedencia del derecho de petición
refiriendo que: “…el derecho de petición es oponible ante las entidades privadas en
determinados casos, concretamente: a) Cuando una institución privada, presta un servicio
público a la comunidad y b) Cuando se trata de organismo u organizaciones que están
investidos de autoridad o realizan funciones de autoridad y por ende, con capacidad de adoptar
decisiones que puedan lesionar derechos fundamentales de la persona; en cuyo caso, es un
imperativo el procurar una respuesta negativa o positiva a las peticiones que a ellos les sea
formulado”.

Por lo mencionado, el derecho de petición consagrado en el art. 24 de la CPE, el cual establece


que: “Toda persona tiene derecho a la petición de manera individual o colectiva, sea oral o
escrita, y a la obtención de respuesta formal y pronta. Para el ejercicio de este derecho no se
exigirá más requisito que la identificación del peticionario”; por su carácter informal e
instrumental para el ejercicio de otros derechos, alcanza o se extiende a particulares, que como
en este caso específico, constituye una OTB.

En este entendimiento, el derecho de petición resulta ser oponible no sólo ante autoridades y
funcionarios públicos sino también ante entidades privadas, organismos u organizaciones y
particulares cuando éstas prestan servicios públicos a la comunidad, o están investidos de
autoridad, realizan funciones de autoridad y tienen la capacidad de adoptar decisiones que
puedan lesionar derechos fundamentales del peticionarte, en cuyo caso la respuesta a la misma
debe ser de forma pronta y oportuna.

III.3. Excepción al conceder tutela ultra petita, al advertir error a tiempo de formular el
petitorio

La SC 0381/2007-R de 10 de mayo, con respecto a conceder la tutela ultra petita, en caso de


error en la formulación del petitorio ha establecido: “ …el Juez de tutela está obligado a
conferir solamente lo que se ha pedido; esto muestra la enorme importancia que tiene el petitum
de la causa, pues, el Juez está vinculado a la misma; esto es, deberá conceder o negar el
petitorio formulado; sólo excepcionalmente, dada la naturaleza de los derechos protegidos es
posible que el Juez constitucional pueda conceder una tutela ultra petita, de cara a dar
efectividad e inmediatez a la protección del derecho a la garantía vulnerada, cuando advierta
que existió error a tiempo de formular el petitorio. Extremo que deberá ser ponderado en cada
caso concreto, al tratarse de una excepción”.

Por lo que de existir error a tiempo de formular el petitorio, y considerando la naturaleza de los
derechos protegidos, excepcionalmente es posible conceder la tutela.

III.4. Análisis del caso

III.4.1. Respecto a la vulneración del derecho a la petición

En el presente caso, evidentemente el accionante, solicitó de manera escrita por más de tres
veces consecutivas, al Presidente de la OTB, de la zona Colcapirhua, el traslado de la conexión
de agua del domicilio donde refiere que vivía anteriormente al domicilio ubicado en la calle final

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1075


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Bolívar, por lo que cursa en antecedentes cuatro solicitudes de traslado de su acción de agua y
conexión sin respuesta alguna del demandado.

Siendo que, toda persona tiene derecho a una respuesta pronta y oportuna, la autoridad
demandada, tenía la obligación de responder formal y oportunamente la solicitud del accionante,
sea en forma positiva o negativa, o caso contrario señalando ante qué autoridades debía recurrir
el accionante, más aún, tomando en cuenta que a través del ejercicio de este derecho, estaba
solicitando la efectivización de otro derecho, como es el agua, el cual está destinado a la
satisfacción de todas las necesidades vitales de una persona.

Por consiguiente, al no haberse pronunciado el demandado sobre dicho petitorio, no existiendo


otras vías o medios para la protección de este derecho, por cuanto se trata de la petición ante
particulares, tomando en cuenta el Fundamento Jurídico III.2.1”…se debe tener entendido que
para el ejercicio de este derecho no se exigirá más requisito que la identificación del
peticionario, y que siendo la petición oponible ante entidades privadas, organismos u
organizaciones y particulares cuando estas prestan servicios públicos a la comunidad, o están
investidos de autoridad, realizan funciones de autoridad y tienen la capacidad de adoptar
decisiones que puedan lesionar derechos fundamentales del peticionante”; se evidencia la
vulneración del derecho de petición del accionante, por falta de una respuesta escrita y motivada
sobre su petición, aclarando que si bien el accionante en el petitorio, incurre en error a tiempo de
formular el petitorio, por cuanto si bien identifica como derecho vulnerado, el de la petición y en
el petitum solicita la inmediata conexión domiciliaria del servicio de agua potable en su
domicilio; es aplicable el Fundamento Jurídico III.3.

III.4.2. Sobre la restricción del derecho a agua

Con respecto a la restricción del acceso al agua, no habiendo el accionante acreditado, que el
demandado, como Presidente de la OTB Zona Sud de Colcapirhua, sea la autoridad que deba
atender la solicitud de traslado o conexión de agua al nuevo domicilio del accionante, o que la
misma sea la entidad prestadora de servicios de agua potable y que el accionante esté privado de
este servicio, no es posible, ingresar al análisis de esta problemática, por cuanto la falta de
acreditación, no da la certeza de que se haya restringido este derecho, por parte de demandado,
lo que inviabiliza se tutele este derecho, más aún cuando la jurisprudencia constitucional ha
señalado que: “la determinación del Tribunal de amparo debe obedecer a la certidumbre sobre
si en efecto se ha violado o amenazado un derecho fundamental y/o garantía constitucional, por
lo que es preciso que el recurrente o agraviado, por una parte, aporte los elementos de prueba
suficientes en lo que se acredite y demuestre la existencia del acto y/u omisión denunciado de
ilegal, y por otra, ese agraviado también debe acreditar que en el supuesto acto y/u omisión es
responsable la autoridad o persona recurrida por haber tenido intervención y decisión” (SC
1968/2010-R de 25 de octubre).

En consecuencia, por cuanto la situación planteada se encuentra dentro las previsiones y


alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Juez de garantías, al denegar la
acción tutelar, no ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y dado
una correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia; en virtud de la autoridad que le confiere la


Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la LTCP, en revisión,
resuelve: REVOCAR la Resolución de 17 de febrero de 2012, cursante a fs. 20 a 23 vta. de obrados,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1076
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pronunciada por el Juez Segundo de Partido de Familia, Niñez y Adolescencia de Quillacollo; en


consecuencia, CONCEDER parcialmente la tutela respecto del derecho de petición,
disponiendo que el demandado, dentro el plazo de cuarenta y ocho, responda a las solicitud del
accionante.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.


Efren Choque Capuma.-Magistrado.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0137/2012


Sucre, 4 de mayo 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00363-2012-01-AAC
Departamento: Cochabamba

En revisión la Resolución 003/2012 de 9 de marzo, cursante de fs. 114 a 116, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Carola Teresa Cabrera
Quiroga contra Alberto Narvaez Acuña, Gerente General a.i. de la Empresa Municipal de
Servicio de Aseo (EMSA).

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memorial presentado el 27 de febrero de 2012, cursante de fs. 20 a 23 vta., la


accionante asevera lo siguiente:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 6 de octubre de 2010, ingresó a trabajar a EMSA en el cargo de Auditora interna;


posteriormente el 1 de agosto de 2011, fue promovida al cargo de Gerente Administrativa y
Financiera; sin embargo, cuando se produjo el cambio de Gerente General en la Empresa, el
ahora demandado en su condición de Gerente General a.i., sin que medie motivo o evaluación
alguna y ninguna justificación, agradeció sus servicios mediante memorando de 2 de septiembre
del mencionado año.

Ante esta situación acudió a la Dirección Departamental de Trabajo denunciando la ilegalidad


que se cometió en su contra; posteriormente, en la audiencia conciliatoria, el Gerente
demandado ratificó su despido; empero, la mencionada Dirección emitió la Resolución JDTC-
GSML/R-036/2011 de 10 de octubre, conminando al Gerente ahora demandado su
reincorporación inmediata al cargo que ocupaba, más el pago de los salarios devengados y
demás derechos sociales.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1077


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Sin embargo, en lugar de cumplirse con la conminatoria, el demandado presentó el 17 de octubre


de 2011, un memorial de aclaración y complementación, que dio lugar al Auto de 21 de
noviembre de ese año, por el que el Jefe Departamental del Trabajo, resaltando la actitud
maliciosa y dilatoria del Gerente General a.i. de EMSA, ratificó la conminatoria de su
reincorporación.

Ante esa situación, solicitó al Gerente demandado cumpla con lo determinado por el Ministerio
de Trabajo, pedido que hasta la fecha de interposición no fue respondido, tampoco se le restituyó
al cargo de Gerente Administrativa y Financiera de EMSA, omisión que ha vulnerado su
derecho al trabajo, al no existir motivo alguno para su destitución, máxime si por su desempeño
fue ascendida al cargo de Gerente Administrativa; ilegalidad que contraviene lo previsto en el
art. 46.I de la Constitución Política del Estado (CPE), que instituye el derecho a una fuente
laboral estable.

En el mismo sentido, el art. 16 de la Ley General del Trabajo (LGT) concordante con el art. 9 de su
Disposición Reglamentaria, establece cada una de las causales de despido; pero, en su caso, el
memorando de agradecimiento de servicios no justificó ninguna causal de destitución, por ello es que
el Inspector del trabajo ordenó su reincorporación sin que el demandado hasta la fecha de
interposición de la presente acción haya cumplido con la conminatoria, con cuya omisión se vulneró
el Decreto Supremo (DS) 0495 de 1 de mayo de 2010, normativa que establece que la conminatoria
es de obligatorio cumplimiento a partir de su notificación, y únicamente podrá ser impugnada en la
vía judicial, activación que no implica la suspensión de la ejecución de la conminatoria; por el
contrario el art. 10.V del citado Decreto, determina que sin perjuicio de lo dispuesto en su parágrafo
IV, la trabajadora o trabajador podrá interponer las acciones constitucionales que correspondan en
función a la inmediatez de la protección del derecho constitucional de estabilidad laboral; por ello, las
SSCC 1612/2003-R y 1277/2010-R, determinaron que la protección del derecho al trabajo proscribe
actos arbitrarios o abusivos de los empleadores, cuya protección involucra el derecho que tiene todo
ciudadano para acceder a un cargo y gozar en su fuente laboral del respeto, estabilidad y condiciones
necesarias para su buen desempeño.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

La accionante considera lesionado su derecho a la estabilidad laboral, previsto en el art. 46.I.2 de


la CPE.

I.1.3. Petitorio

Solicita se conceda la acción, disponiéndose: a) Se la restituya a las funciones que desempeñaba


como Gerente Administrativa y Financiera de EMSA; b) Se ordene el pago de los salarios
devengados y demás derechos sociales; y, c) Se sancione en costas a su favor.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 9 de marzo de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
112 a 113 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante a través de su abogado ratificó y reiteró los extremos de su demanda.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1078


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Con el derecho a la réplica, la accionante aseveró que: 1) La interposición del recurso de


complementación a la conminatoria no implica suspensión de la ejecución; por lo que se agotó la
vía administrativa; 2) El demandado tenía conocimiento de la conminatoria pero designó a otra
persona en su cargo; 3) La empresa debió impugnar en su momento la decisión del Jefe
Departamental del Trabajo; por lo que no puede hacerlo en esta acción constitucional; 4) La
actuación del demandado es maliciosa, puesto que para otras actuaciones la notificaron en forma
personal, pero con el rechazo a su solicitud de reincorporación por supuesto abandono lo
hicieron en el tablero, quedando así en indefensión; y, 5) Ante la falta de reincorporación por
EMSA, no podía estar sin sustento económico.

En respuesta a los cuestionamientos del Tribunal de garantías la accionante aseveró que: i)


Ingresó a trabajar al Colegio de Auditores el 5 de noviembre de 2011; y, ii) Con la conminatoria
se hizo presente a EMSA, pero le indicaron que no tenían instrucciones del Gerente General
para reincorporarla.

I.2.2. Informe del servidor público demandado

El Gerente General a.i. de EMSA en su informe que cursa de fs. 85 a 88 de obrados y en la


audiencia sostuvo lo siguiente: a) La improcedencia del amparo presentado por la accionante, en
razón que omitió mencionar a los terceros interesados que pudieran ser afectados en sus
derechos o intereses, tal el caso de la Jefatura Departamental de Trabajo, que fue la instancia que
emitió la conminatoria de reincorporación, cuya presencia es vital a efectos de informar sobre si
se procedió a la verificación de la reincorporación por dicha instancia en las oficinas de EMSA;
tampoco se señaló como tercero interesado a Antonio del Llano Suárez, quien al presente viene
cumpliendo las funciones de Gerente Administrativo de mencionada Empresa; b) Es evidente
que la accionante prestó servicios en EMSA, teniendo el primer contrato una vigencia del 6 de
octubre al 31 de diciembre de 2010 -2 meses y 25 días-; el segundo, del 21 de enero al 31 de
diciembre de 2011 -11 meses y 10 días de vigencia-, siendo que las funciones asignadas en los
dos contratos de trabajo eran de Auditor Interno de dicha Empresa; sin embargo, cuando se
encontraba en plena vigencia el último contrato, la accionante presentó su renuncia al cargo,
operándose su retiro voluntario, conforme prevén los arts. 1 y 2 del DS 1592 de 19 de abril de
1949, concordante con el art. 12 de la LGT; c) El 1 agosto de 2011, se generó una nueva
relación laboral entre la accionante y EMSA en virtud a la designación que efectuó el Gerente
David Rocha Ana, quien nombró a la accionante en el cargo de Gerente, Administrativo
Financiero esa Empresa, otorgándosele funciones y un puesto totalmente diferente del que se le
había asignado en los contratos de trabajo a plazo fijo antes referidos; d) Emitió el memorando
de agradecimiento de servicios dentro del periodo de prueba; siendo que el DS 17289, que
excluía del periodo de prueba a los trabajadores con título universitario, los recontratados, etc.
fue derogada por el art. 55 del DS 21060, circunstancia que demuestra la legalidad del despido
por encontrarse dentro del periodo de prueba; e) La Jefatura Departamental de Trabajo en forma
ilegal emitió la conminatoria de 10 de octubre de 2011, para que en el plazo de cuarenta y ocho
horas se reincorpore a la accionante y se le pague salarios devengados y demás derechos
sociales; Resolución con la que fue notificado el 14 del mismo mes y año; f) La decisión de la
Jefatura Departamental contraviene lo previsto en el art. 5 de la Resolución Ministerial (RM)
868/2010 de 26 de octubre, que dispone: “en caso de despido de trabajadoras y trabajadores que
hubieran prestado servicios en entidades y empresas públicas que a la fecha de su despido estén
sujetos a la aplicación de la Ley General del Trabajo, deberán hacer uso previamente de los
recursos que prevén las normas de responsabilidad por la función pública cuando estén
sometidos a ellas”; siendo este el caso de todos los trabajadores de EMSA, y en el que se halla
incluida la accionante; por tanto, la Jefatura Departamental de Trabajo debió haber rechazado la
solicitud de reincorporación hasta tanto la accionante no cumpla con los requisitos previos, es
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1079
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

decir, la interposición de los recursos de revocatoria y jerárquico; entonces, la Jefatura vició de


nulidad la conminatoria de reincorporación, misma que fue pronunciada sin la debida
fundamentación de hecho y derecho e incurriendo en una omisión valorativa que hace al debido
proceso; g) La conminatoria fue pronunciada después de más de un mes de la audiencia
conciliatoria convocada y al solicitarse una aclaración y complementación, la Jefatura
Departamental de Trabajo sin mayor fundamento, después de más de un mes, desestimó el
recurso de complementación y dispuso en forma ilegal nuevamente la reincorporación con el
pago de salarios devengados y otros beneficios, no obstante, que EMSA no tendría por qué
pagar salarios devengados que se generaron por negligencia y retardación de la Jefatura
Departamental; h) La solicitud de aclaración y complementación que suspendía la ejecución de
la conminatoria hasta tanto la Dirección Departamental se pronuncie, siendo notificados el 24 de
noviembre de 2011 con el Auto que desestimó su solicitud de aclaración; empero, la accionante
no se hizo presente a las oficinas para su reincorporación; por el contrario, recién por nota de 6
de diciembre de ese año, solicitó su restitución, y previo a los informes de Jefatura de Personal y
Asesoría Legal, mediante nota de 8 del mencionado mes y año rechazó su solicitud porque la
accionante no obstante de ser notificada el 24 de noviembre del referido año, con el Auto de
conminatoria no se apersonó a EMSA para su reincorporación; entonces, tomando en cuenta que
su ausencia se prolongó por más de seis días hábiles computables entre la fecha de notificación
con el Auto de referencia y la “nota en la que solicitó su reincorporación”, se consideró su
ausencia como abandono injustificado; por tanto, su renuncia tácita; i) La accionante fue
notificada en el tablero de EMSA con la nota de rechazo a su pedido, porque no compareció a
estas oficinas para su notificación personal, situación que se puso en conocimiento de la Jefatura
Departamental de Trabajo, circunstancias que demuestran que en su calidad de Gerente no
conculcó ningún derecho o garantía constitucional; evidenciándose que fue la propia accionante
que renunció a su reincorporación por no haberse constituido en la Empresa; y, j) La renuncia
tácita de la accionante a EMSA queda corroborada con su ingreso a la sección de Recursos
Humanos del referido Colegio Departamental en su calidad de Administradora, y pese a las
reiteradas solicitudes por parte de EMSA para que se certifique esta situación, el Secretario
General del Colegio de Auditores determinó que cualquier certificación debía realizársela por
orden judicial, respuesta que importa la tácita aceptación que la accionante, cumple o cumplió
funciones en el mencionado Colegio. Finalizó solicitando la denegatoria de la acción.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

El tercero interesado no se presentó porque no fue citado.

I.2.4. Resolución

La Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Cochabamba denegó la tutela


sin imposición de costas, con los siguientes fundamentos: 1) En el presente caso, la accionante
pretende su reincorporación laboral al amparo del DS 0495, que modificó el art. 10 del DS
28699, al establecer que en caso de que el trabajador opte por su reincorporación podrá recurrir a
este efecto ante el Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, donde una vez constatado
el despido injustificado se conminará al empleador a la reincorporación inmediata al mismo
puesto que ocupaba la trabajadora o el trabajador al momento del despido, más el pago de los
salarios devengados y demás derechos sociales que correspondan a la fecha de reincorporación;
cuyo párrafo V establece que sin perjuicio de lo dispuesto en el parágrafo IV del presente
artículo, la trabajadora o el trabajador podrá interponer las acciones constitucionales que
correspondan, tomándose en cuenta la inmediatez de la protección constitucional a la estabilidad
laboral; 2) El fundamento de la presente acción persigue consolidar el derecho fundamental que
tiene toda persona a una fuente laboral estable y, en consecuencia, dar rigor al principio
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1080
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

constitucional de la estabilidad laboral previsto en los arts. “46.2)2” y 48.II de la CPE; empero el
art. 77.2 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), advierte como condición
esencial que la acción debe señalar con precisión del nombre y domicilio de la parte demandada,
así como de los terceros interesados; por tanto, no obstante que era deber de la accionante dar a
conocer el nombre y domicilio del tercer interesado, incumplió con este requisito, máxime si la
parte demandada con prueba documental informó que el 4 de octubre de 2011, contrató los
servicios de Antonio del Llano Suárez, para que ejerza como Gerente Administrativo Financiero
de EMSA, cargo que ocupaba la accionante hasta el 2 de septiembre del citado año;
circunstancia que impide un pronunciamiento sobre la causa sin antes escuchar en audiencia al
tercero interesado, quien debe necesariamente ser incluido como tercero interesado a fin de
hacer valer su derecho a la defensa; y, 3) El Tribunal Constitucional en sus SSCC 0814/2006-R
y 1221/2006-R, estableció subreglas para el señalamiento del domicilio del tercero interesado,
su notificación y la participación de éste en la acción de amparo constitucional, así como la
forma de resolución a pronunciarse para los casos en los que se advierte que no se cumplió con
la identificación y/o su notificación; y en caso de constatarse que los accionantes omitieron la
identificación del tercero interesado, el Tribunal Constitucional debe denegar la tutela solicitada,
dejando expresa constancia que no se ingresó al análisis de fondo; en consecuencia, se constata
que la presente acción adolece de defectos de forma que necesariamente deben ser subsanados
por la accionante a fin de de no perjudicar al tercero interesado; siendo necesario incluir en la
misma calidad a quien representó a la jefatura Departamental de Trabajo.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. Mediante memorando de 2 de septiembre de 2011, el Gerente General a.i. de EMSA,


agradeció los servicios prestados de Carola Teresa Cabrera Quiroga -ahora accionante- en el
cargo de Gerente Administrativa Financiera de la citada Empresa (fs. 5).

II.2. El 15 de septiembre de 2011, la accionante presentó denuncia al Jefe Departamental de


Trabajo, solicitando su reincorporación (fs. 9), instancia que mediante Resolución JDTC-
GSML/R-036/2011 de 10 de octubre, determinó la reincorporación inmediata (fs. 8), decisión
con la que EMSA fue notificada el 14 de octubre de 2011.

II.3. Mediante memorial de 17 de octubre de 2011, EMSA pidió a la Jefatura Departamental de


Trabajo, la aclaración y complementación de la Resolución de conminatoria (fs. 57), fue resuelta
mediante Auto de 21 de noviembre de ese año, por el que el Jefe Departamental de Trabajo,
denegó la aclaración y complementación requerida, ratificando la conminatoria de
reincorporación, al amparo de lo previsto en el art. 10 del DS 0495 (fs. 57), decisión que fue
comunicada al demandado el 24 de noviembre de 2011.

II.4. Por nota de 6 de diciembre de 2011, la accionante solicitó al demandado el cumplimiento


de la conminatoria de su reincorporación (fs. 17 y vta.). Mediante nota de 8 del mencionado mes
y año, el ahora demandado rechazó la solicitud de la accionante bajo el argumento de no haberse
apersonado a oficinas de EMSA para su reincorporación (fs. 53 y 62).

II.5. El 19 de diciembre de 2011, la accionante puso en conocimiento del Jefe Departamental de


Trabajo la falta de cumplimiento de la conminatoria de reincorporación (fs. 15 y vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1081


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.6. El 27 de febrero de 2012, la ahora accionante interpuso la presente acción de amparo


constitucional contra Alberto Narvaez Acuña, Gerente General a.i. de EMSA, en cuyo
memorial no se consignó el nombre del o los terceros interesados (fs. 20 a 23 vta.).
Solicitando la accionante en el Otrosí 3º, en vía de medida cautelar, se ordene al demandado
abstenerse de “ejercitar nombramiento del cargo de Gerente Administrativo Financiero en la
empresa EMSA” (sic).

II.7. Por Auto de 2 de marzo de 2012, el Tribunal de garantías admitió el amparo constitucional
presentado por la accionante, sin ordenar su subsanación por no haberse consignado el
nombre del tercero interesado, y respecto del Otrosí 3º dispuso “Estése a lo principal” (fs. 27).
Con el referido Auto fue citada el 5 de ese mes y año, y el demandado el 7 de marzo del año en
curso (fs. 27 vta.).

II.8. Consta que Antonio del Llano Suarez, mediante contrato de trabajo a plazo fijo 166-01, de
4 de octubre de 2011, fue contratado por el Gerente General a.i. -ahora demandado- para ocupar
el cargo de Gerente Administrativo Financiero de EMSA (fs. 51 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante denuncia la vulneración de su derecho a la estabilidad laboral alegando que en


forma ilegal fue despedida por el Gerente General de EMSA, quien hasta la fecha de
interposición de la presente acción no ha dado cumplimiento a la conminatoria de
reincorporación dispuesta por el Jefe Departamental de Trabajo; sin embargo, como la
resolución a pronunciarse, podría afectar los derechos de terceras personas con interés legítimo
en su resultado; este Tribunal, antes de abordar la cuestión de fondo, debe considerar si la
intervención de terceros en esta acción es fundamental, para así garantizar el debido proceso
constitucional de todos quienes deben intervenir en el mismo. Se analizara si en el presente caso,
corresponde conceder o no la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional. Su configuración constitucional

La SCP 0002/2012 de 13 de marzo, refiriéndose a la naturaleza del amparo constitucional


estableció lo siguiente:

“El orden constitucional boliviano, dentro de las acciones de defensa, instituye en el art. 128 la
acción de amparo constitucional como un mecanismo de defensa que tendrá lugar contra los
´actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley´.

Del contenido del texto constitucional de referencia, puede inferirse que la acción de amparo
constitucional es un mecanismo de defensa jurisdiccional, eficaz, rápido e inmediato de
protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, cuyo ámbito de
protección se circunscribe respecto de aquellos derechos fundamentales y garantías, que no se
encuentran resguardados por los otros mecanismos de protección especializada que el mismo
orden constitucional brinda a los bolivianos, como la acción de libertad, de protección de
privacidad, popular, de cumplimiento, etc. Asimismo, desde el ámbito de los actos contra los
que procede, esta acción se dirige contra aquellos actos y omisiones ilegales o indebidos
provenientes no sólo de los servidores públicos sino también de las personas individuales o
colectivas que restrinjan o amenacen restringir los derechos y garantías objeto de su
protección.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1082
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En este contexto, el amparo constitucional boliviano en su dimensión procesal, se encuentra


concebido como una acción que otorga a la persona la facultad de activar la justicia
constitucional en defensa de sus derechos fundamentales y garantías constitucionales.
El término de acción no debe ser entendido como un simple cambio de nomenclatura, que no
incide en su naturaleza jurídica, pues se trata de una verdadera acción de defensa inmediata,
oportuna y eficaz para la reparación y restablecimiento de los derechos y garantías
fundamentales, y dada su configuración, el amparo constitucional se constituye en un proceso
constitucional, de carácter autónomo e independiente con partes procesales diferentes a las del
proceso ordinario o por lo menos con una postura procesal distinta, con un objeto específico y
diferente, cual es la protección y restitución de derechos fundamentales con una causa distinta
a la proveniente del proceso ordinario, esto es, la vulneración concreta o inminente de derechos
fundamentales a raíz de actos y omisiones ilegales o indebidos con un régimen jurídico procesal
propio.

En este orden de ideas, la acción de amparo constitucional adquiere las características de


sumariedad e inmediatez en la protección, por ser un procedimiento rápido, sencillo y sin
ritualismos dilatorios. A estas características se añade la de generalidad, a través de la cual la
acción puede ser presentada sin excepción contra todo servidor público o persona individual o
colectiva.

Finalmente cabe señalar, que dentro de los principios procesales configuradores del amparo
constitucional, el constituyente resalta la inmediatez y subsidiariedad al señalar en el parágrafo
I del art. 129 de la CPE, que esta acción ´(…) se interpondrá siempre que no exista otro medio
o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados´.

Lo señalado implica que la acción de amparo forma parte del control reforzado de
constitucionalidad o control tutelar de los derechos y garantías, al constituirse en un
mecanismo constitucional inmediato de carácter preventivo y reparador destinado a lograr la
vigencia y respeto de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, siempre que no
exista otro medio de protección o cuando las vías idóneas pertinentes una vez agotadas no han
restablecido el derecho lesionado, lo que significa que de no cumplirse con este requisito, no se
puede analizar el fondo del problema planteado y, por tanto, tampoco otorgar la tutela”.

III.2. La exigibilidad de identificación del tercero interesado dispuesta por la


jurisprudencia constitucional. Necesaria revisión de su desarrollo jurisprudencial

Tomando en cuenta que el art. 77.2 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTPC),
establece como requisito formal la identificación de los terceros interesados corresponde
previamente referirnos al desarrollo jurisprudencial efectuado por el Tribunal Constitucional
respecto a la necesidad de citar en la acción de amparo constitucional al tercero interesado.

En este cometido, a partir de la SC 1351/2003-R de 16 de septiembre, se estableció que: “…en


todo proceso judicial o administrativo en el que la decisión final del mismo pudiera afectar los
derechos o intereses legítimos de terceras personas, éstas deben ser citadas o notificadas, según
el caso, a los fines de que puedan ejercer, en igualdad de condiciones, el derecho a la defensa,
ofreciendo las pruebas que consideren pertinentes y controvirtiendo las que se presenten en su
contra dentro del proceso, de acuerdo con las formas propias de cada juicio y conforme a la
normativa procesal pertinente”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1083


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Exigibilidad que tiene la finalidad de garantizar el derecho a la defensa de personas que si bien
no son parte en el amparo constitucional; empero, tienen un interés legítimo en su resultado.

Bajo esta perspectiva el Tribunal Constitucional ha desarrollado una línea jurisprudencial


referida a la forma y procedimiento de su citación, como las emergencias o efectos jurídicos si
acaso se incurre en una omisión en la citación del tercero interesado. Así la citada Sentencia
determinó que: “… el Juez o Tribunal del recurso, como protector de los derechos
fundamentales de los ciudadanos, debe garantizar el derecho a la defensa de los terceros que
tengan interés legítimo en el proceso en cuestión. En este sentido, por regla general, en todo
recurso de amparo que se derive de un proceso judicial o administrativo, en el que una de las
partes demande al juez, Tribunal u órgano administrativo por lesión a algún derecho
fundamental o garantía constitucional, supuestamente generada en el proceso principal, se
debe hacer conocer, mediante la notificación pertinente, a la otra parte -que adquiere la
calidad de tercero interesado- la admisión del recurso, al mismo tiempo que a la autoridad
recurrida. En los demás casos, el juez o Tribunal, debe extraer de los hechos que motivan el
recurso, si existen terceros con interés legítimo y, en consecuencia, debe disponer su
notificación. El término de las 48 horas, señalado para que el recurrido presente su informe,
cuenta también para que el tercero interesado pueda apersonarse y formular sus alegatos,
computable, para ambos, desde la última notificación con la admisión del recurso” (las
negrillas nos corresponden).

De otro lado, la SC 0814/2006-R de 21 de agosto, reiterada por las SSCC 0456/2010-R,


0637/2010-R, 1395/2011-R, entre otras, refiriéndose a la forma y procedimiento para la citación
al tercero interesado señaló que: “…la citación o notificación al sujeto procesal interviniente en
el recurso de amparo constitucional en calidad de tercero interesado, puede ser personal o por
cédula; y en cuanto al lugar o domicilio donde deba practicarse la misma, se debe tener en
cuenta que, esta exigencia se da cuando el recurso de amparo constitucional es emergente de un
proceso judicial o administrativo, donde una de las partes podría ser afectada; entonces, a
objeto de encontrar un equilibrio entre el derecho a la defensa y el principio de celeridad
procesal, la notificación al tercero interesado, en los casos que no sea posible hacerlo
personalmente, será válida mediante cédula en el último domicilio procesal que -el tercero-
hubiera señalado en el proceso principal, el cual deberá ser consignado por el recurrente en la
demanda de amparo constitucional; aún en el caso de que el tercero interesado haya
abandonado tal domicilio, o hubiese cesado el patrocinio del abogado; puesto que la exigencia
se reduce al señalamiento del domicilio y la citación o notificación respectiva con la admisión
de la demanda, debido a que el ejercicio del derecho a la defensa del tercero interesado, una
vez notificado, es potestativo y no imperativo; empero, si comparece será debidamente
escuchado” (las negrillas son nuestras).

Asimismo, en cuanto a los efectos del incumplimiento de este requisito, la citada Sentencia
determinó las siguientes reglas a aplicarse:
“En consecuencia, en el futuro deberán aplicarse las siguientes subreglas:

a) Es exigible el señalamiento del domicilio cuando el recurso de amparo constitucional emerge


de un proceso judicial o administrativo.

b) La notificación puede ser personal o por cédula.

c) En caso de desconocerse el domicilio real o actual, deberá señalarse el último domicilio


procesal del proceso principal.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1084


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

d) Efectivizada la notificación, su participación en el recurso de amparo es potestativa.

e) En etapa de admisión, si se advierte esta omisión, corresponde aplicar el art. 98 de la LTC,


concediendo plazo para su subsanación, y en caso de ser incumplido, da lugar al rechazo del
recurso; y

f) En etapa de revisión, si se advierte que el recurso fue admitido, tramitado y se ha llevado a


cabo la audiencia de consideración, pese a no cumplir con este requisito, da lugar a la
improcedencia del amparo, sin ingresarse al análisis de fondo del asunto”.

Finalmente, la SC 1221/2006-R de 1 de diciembre, efectuando una modulación respecto a los


efectos jurídicos en caso de omitirse con la citación al tercero interesado, determinó que:
“…tratándose de una omisión atribuible a las autoridades jurisdiccionales que conocieron el
recurso de amparo constitucional y no al recurrente, se anula todo lo obrado hasta que el
Oficial de Diligencias, realice la notificación con el recurso de amparo constitucional
interpuesto, a la tercera interesada y querellante con las formalidades expresadas en la citada
jurisprudencia” (las negrillas nos corresponden) Aclarándose que esta última situación opera
ante la previsibilidad de que los efectos de la resolución de amparo constitucional podrían
afectar la situación jurídica del tercero interesado, conforme determinó la SC 0408/2011-R
de 14 de abril.

III.3. La regulación de la identificación del tercero interesado en la Ley del Tribunal


Constitucional Plurinacional

Según el art. 77.2 de la LTCP, se establece como requisito de la demanda de acción de amparo
constitucional identificar al tercero interesado; empero, considerando que el desarrollo
legislativo de la citada Ley se refiere únicamente a la exigencia de su identificación como
contenido de la demanda de acción de amparo sin establecer la forma, procedimiento ni los
efectos jurídicos en caso de incumplirse con este requisito, corresponde realizar, en lo
conducente, una integración a este precepto legal del desarrollo jurisprudencial glosado
precedentemente sobre la exigencia de citación al tercero interesado y sus emergencias,
estableciéndose lo siguiente:

1) La teleología de la citación a los terceros interesados con la acción de amparo constitucional


es garantizar su derecho a ser oídos, en el entendido que si bien los terceros interesados no
son parte en el amparo constitucional, empero, tienen un interés legítimo en su resultado
por la probable afectación de sus derechos, que pudiera derivar con el pronunciamiento del
fallo de tutela constitucional. De ahí la relevancia de ser citados con la admisión de esta acción,
a efectos de ser oídos y con la facultad de hacer uso de todos los medios de defensa que
consideren pertinentes.

2) La citación de los terceros interesados con la demanda de amparo constitucional, al no ser una
mera formalidad, en razón a que se encuentra destinada a garantizar el derecho a ser oídos a
quienes puedan verse afectados con el resultado del fallo de tutela, se constituye en un
requisito de carácter formal imprescindible para la admisión de la acción de amparo
constitucional, que debe ser observado por el accionante, quien tiene la carga procesal de
identificar con precisión a los terceros interesados y señalar sus domicilios; en cuyo caso el
Tribunal de garantías tiene el deber inexcusable de ordenar la citación del tercero
interesado, de conformidad con la forma y procedimiento establecidos por la
jurisprudencia constitucional glosada, que resulta aplicable al no ser contraria a los mandatos
constitucionales que regulan la acción de amparo constitucional.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1085
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

3) Cuando el accionante no haya cumplido con la carga procesal de identificar al tercero


interesado, dicha omisión debe ser observada por el tribunal de garantías en la etapa de
admisibilidad de la acción y no a tiempo de resolverla, debiendo ordenar su subsanación,
otorgando para tal efecto el plazo de cuarenta y ocho horas; salvo que por circunstancias
excepcionales exista la necesidad de su ampliación, en esta situación el tribunal de
garantías deberá tener el cuidado de asegurar que esta ampliación sea acorde con la
naturaleza inmediata de protección del amparo constitucional a fin de o entorpecer la
tutela pronta y oportuna que brinda.

En este entendido, cabe aclarar que si bien la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional no
otorga un plazo específico para subsanar el incumplimiento de requisitos formales, entre ellos, la
identificación del tercero interesado; sin embargo, la justificación de su incorporación se
encuentra orientada a evitar que estos requisitos formales tengan que ser observados en el
desarrollo de la audiencia de amparo constitucional, con la lógica consecuencia perniciosa de
denegarse la tutela por aspectos enteramente formales, que muy bien pudieron ser corregidos
oportunamente. En tal sentido, el plazo de subsanación de cuarenta y ocho horas encuentra
sustento en la práctica judicial operada por los jueces y tribunales de garantías en virtud de la
jurisprudencia constitucional pronunciada sobre este extremo, plazo que resulta conducente con
la naturaleza sumaria e inmediata de esta acción, salvo la excepción señalada precedentemente.

Consecuentemente, la omisión del accionante en identificar al tercero interesado, no exime


al tribunal de garantías del deber de ordenar la observancia de este requisito en la etapa
de admisibilidad, quedando también implícita la obligación del Tribunal, tratándose de
causas que no emergen de procesos judiciales o administrativos, de extraer de los hechos
que motivan la acción, la existencia de terceros con interés legítimo, para así asegurar su
debida citación y resguardar el debido proceso constitucional y la igualdad jurídica de las
partes y de quienes se pudieren encontrar afectados con su resultado.

4) En etapa de admisibilidad, ante el incumplimiento de este requisito por parte del


accionante, se mantienen los efectos jurídicos establecidos por la jurisprudencia
constitucional debiendo rechazarse la acción cuando el accionante no subsanó su omisión en
el plazo otorgado por el Tribunal de garantías.

5) Cuando en etapa de revisión este Tribunal advierte que la acción de amparo fue admitida y se
llevó a cabo la audiencia de consideración pese a la inobservancia de este requisito, dará lugar a
la denegatoria de la acción sin ingresarse al análisis de fondo del asunto, sin perjuicio que el
accionante pueda volver a interponer la acción; en cuyo caso se suspende el cómputo del
plazo de caducidad del amparo constitucional para los efectos de una nueva presentación,
cómputo que se reiniciará desde la notificación con la sentencia constitucional que no
ingresó al fondo.

6) En caso que este Tribunal constatare en revisión, que la falta de citación al tercero interesado
es atribuible al Tribunal de garantías, por no haberlo citado, no obstante que el accionante
cumplió con la carga procesal de identificación, se anulará obrados siempre y cuando sea
previsible la afectación o alteración de la situación jurídica del tercero interesado.

III.4. Sobre presunta improcedencia del amparo constitucional por acto consentido

Finalmente cabe referirse a lo afirmado por el demandado respecto a que existiría acto
consentido, porque la accionante habría realizado renuncia tácita al trabajar, según denuncia el
demandado, desde el 5 de noviembre de 2011 al Colegio de Auditores.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1086
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Sobre el particular, la SC 1667/2004-R de 14 de octubre, consideró que el acto consentido para


operar como causal de improcedencia, debe ser entendido “…como cualquier acto o acción que
el titular del derecho fundamental realice ante la autoridad o particular que supuestamente
lesionó el mismo, como también ante otra instancia, dejando advertir o establecer claramente
que acepta o consiente de manera voluntaria y expresa la amenaza, restricción o supresión a
sus derechos y garantías fundamentales, de modo que no siempre podrá exigirse un acto en el
que el titular manifieste textualmente y por escrito que acepta libre y expresamente el acto
ilegal u omisión indebida, sino que ello podrá deducirse con los elementos de juicio suficientes
del accionar que el titular hubiera tenido a partir de la supuesta lesión de la que hubiesen sido
objeto sus derechos y garantías constitucionales”.

Entendimiento que fue precisado en la SC 0672/2005-R de 16 de junio, en la que se señaló: (…)


para declarar la improcedencia de un recurso de amparo constitucional por esa causal, no es
suficiente una actuación implícita, dado que el consentimiento expreso importa un acto
positivo, concreto, libre e inequívoco, vinculado de manera directa a la actuación ilegal
impugnada; en otras palabras, la manifestación de la voluntad debe demostrar, de manera
indubitable, el consentimiento a la amenaza o lesión a algún derecho fundamental.

Consecuentemente, los actos, para que produzcan las consecuencias jurídicas expresadas en el
art. 96.2) de la LTC, deben provocar en el Tribunal la convicción plena de que el recurrente
está de acuerdo con el acto reclamado; dado que la simple presunción del consentimiento por
acciones que no están directamente relacionadas con el supuesto acto ilegal, lesionaría la
garantía de la tutela jurisdiccional eficaz, entendida “…como el derecho que tiene toda
persona de acudir ante un juez o tribunal competente e imparcial, para hacer valer sus
derechos o pretensiones, sin dilaciones indebidas” (SC 1044/2003-R de 22 de julio)” ( las
negrillas nos corresponden). Entendimientos jurisprudenciales refrendados por las SSCC
1033/2010-R, 0685/2010-R, entre otras.

En el caso analizado, una vez producido el acto considerado ilegal por la accionante, ésta acudió
a la Dirección Departamental de Trabajo denunciando la ilegalidad que se cometió en su contra;
instancia que por decisión de 10 de octubre de 2011, conminó a la EMAS la reincorporación
inmediata de la accionante; sin embargo, la determinación asumida por el mencionado Jefe
Departamental del trabajo no fue cumplida por el demandado, evidenciándose que la accionante
solicitó al demandado el cumplimiento de la conminatoria; asimismo por nota de 16 de
diciembre de 2011 denunció esta situación al Jefe Departamental de Trabajo;
consiguientemente, los actos realizados por la accionante no permiten advertir que aceptó o
consintió de manera voluntaria y expresa los actos considerados ilegales; por el contrario,
adoptó una actuación activa para el restablecimiento del derecho considerado lesionado,
realizando los reclamos reiterados ante la autoridad demandada, así como ante el Jefe
Departamental del Trabajo, no pudiendo concluirse que por su ingreso al Colegio de Auditores
hubiera consentido con el acto considerado ilegal.

Un entendimiento contrario, negaría a la accionante la posibilidad de procurarse el sustento


necesario para ella y su familia, en tanto se defina su situación, obligándole a permanecer en
forma indefinida en el estado de vulneración del derecho que la accionante considera lesionado
y en un estado de incertidumbre que riñe con el orden jurídico. Consecuentemente, en el caso
que se examina no opera la causal de improcedencia prevista en el art. 82.5 de la L TCP,
referida al consentimiento del acto considerado ilegal.

III.5. Análisis del caso concreto

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1087


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el caso que se examina, se constata que la ahora accionante en procura del restablecimiento
de sus derechos considerados lesionados formuló acción de amparo constitucional el 27 de
febrero de 2012, contra Alberto Narvaez Acuña, Gerente General a.i. de EMSA, en cuyo
memorial no consignó el nombre del o los terceros interesados; solicitando, por el contrario,
en el Otrosí 3º de su memorial, en vía de medida cautelar, se ordene al demandado abstenerse de
“ejercitar nombramiento del cargo de Gerente Administrativo Financiero en la empresa EMSA”
(sic).

El Tribunal de garantías por Auto de 2 de marzo de 2012, admitió el amparo constitucional


presentado por la accionante y respecto del otrosí 3º dispuso “Estése a lo principal”,
celebrándose la audiencia de consideración del amparo el 9 de marzo de 2011, en la cual
pronunció resolución denegando la tutela al advertir que la presente acción adolecía de defectos
de forma por no haberse identificado al tercero interesado y “que necesariamente deben ser
subsanados por la accionante a fin de no perjudicar al tercero interesado; siendo necesario
incluir en la misma calidad a quien representó a la Jefatura Departamental de Trabajo” (sic).

De acuerdo con las reglas y subreglas señaladas, es posible concluir que el Tribunal de garantías
ante la omisión de la accionante en consignar el nombre del tercero interesado, en lugar de
admitir directamente la acción, debió ordenar su subsanación, al tratarse de un requisito de
admisibilidad, pues éste al igual que los otros requisitos de forma, debe ser observado para su
subsanación antes de admitir la acción y no a tiempo de resolverla, como ocurrió en el caso de
autos, en el que el Tribunal de garantías admitió la acción y celebró la audiencia de amparo, y en
resolución de la misma denegó la tutela por el incumplimiento de este requisito, desconociendo
que si bien es evidente que la actual Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional no establece
un plazo de subsanación para los requisitos formales; empero, tampoco exime al tribunal de
garantías del deber de ordenar la observancia de este requisito en la etapa de admisibilidad y de
resguardar la tramitación de la acción de amparo en correspondencia con su finalidad, esto es de
otorgar una tutela pronta y oportuna asegurando un proceso constitucional de tutela respetuoso
de las garantías del debido proceso, que resguarde la igualdad jurídica de las partes y de quienes
se pudieren encontrar afectados con su resultado.

En tal sentido, ante la falta de identificación del tercero interesado en la demanda de amparo, el
Tribunal de garantías independientemente de la omisión incurrida por la accionante debió
cumplir con el deber de extraer de los hechos que motivan la acción, la existencia de terceros
con interés legítimo, otorgando a la accionante el plazo de subsanación de cuarenta y ocho horas
para que cumpla con el requisito omitido.

Consecuentemente, al advertirse una omisión tanto por la parte accionante de amparo en no


identificar al tercero interesado, así como por el Tribunal de garantías de no ordenar su
subsanación, estas circunstancias impiden un pronunciamiento en el fondo de la demanda de
tutela y, por lo mismo, su denegatoria, en razón de la existencia de tercero interesado en la
presente causa, conforme se evidencia del nuevo nombramiento que realizó el Gerente General
demandado, en el cargo cuya reincorporación solicita la accionante.

Por lo precedentemente señalado, se establece que el Tribunal de garantías que conoció y


resolvió el presente amparo, al haber denegado la presente causa, aunque indebidamente lo hizo
en etapa de resolución, compulsó y evaluó correctamente la problemática.

POR TANTO

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1088


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, resuelve:

1º APROBAR la Resolución 003/2012 de 9 de marzo, cursante de fs. 114 a 116 vta.


pronunciada por la Sala Social y Administrativa del tribunal Departamental de Cochabamba, y
en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, con la aclaración que no se ingresó al fondo de
la causa.

2º Al tratarse de una Sentencia integradora de jurisprudencia, se ordena su difusión por


Secretaría General a las Salas de este Tribunal y a los jueces y tribunales de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.-Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0138/2012


Sucre, 4 de mayo de 2011

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00125-2012-01-AAC
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 04/2012 de 9 de febrero, cursante de fs. 44 a 48, pronunciada, dentro


de la acción de amparo constitucional interpuesta por Amílcar Pupuisiri Solís contra Luis
Carlos Zambrano Aguirre, José Vicente Chirinos Góngora, Rector y Responsable del
Módulo Avícola, respectivamente, ambos de la Universidad Autónoma del Beni “José
Ballivian”.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

El accionante, por escrito presentado el 3 de febrero de 2012, cursante de fs. 9 a 12, manifestó
que:

I.1.1. Fundamentos de hecho que motivan la acción

El 1 de enero de 2008, fue contratado por la Universidad Autónoma del Beni “José Ballivián”,
para prestar sus servicios de Sereno Diurno del Módulo Avicola; sin embargo, el 3 de enero de
2012 a tiempo de presentarse en su fuente laboral -habiendo trabajado normalmente hasta medio
día-, recibió un mensaje de su compañero de trabajo, quién le indicó que José Vicente Chirinos
Góngora, encargado del Módulo Avícola, había instruido que se le comunique que ya no fuese a
trabajar, puesto que se contrató a otra persona para que realice sus funciones -hecho que
constató personalmente al ver que fue contratado un nuevo empleado-.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1089
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El posible origen del despido intempestivo que sufrió, presumiblemente fue a causa de un
reclamo verbal que presentó al Encargado del Módulo Avícola, toda vez que fue contratado para
realizar las funciones de Sereno Diurno; sin embargo, se le asignó las de peón, que cumplía en el
horario de horas 6:00 a 18:00, es decir, dentro de doce horas de trabajo, cuando la jornada de
trabajo de un peón es de 8 horas, es decir, que estaba trabajando más de lo establecido por la Ley
General del Trabajo, sin que se le reconozcan horas extraordinarias; en ese sentido, le hizo
conocer que no podía seguir trabajando de esa manera, o en su caso se le permita ejercer el cargo
de Sereno Diurno para el que fue contratado y en caso de aceptarle el cargo de sereno, recién
tendría la obligación de trabajar doce horas por día.

En ese contexto, al haber sido despedido de forma injustificada, forzosa e intempestivamente, se


actuó contrariamente a lo establecido por los arts. 49.III y 117.I de la Constitución Política del
Estado (CPE), y 11 del Decreto Supremo 28699 de 1 de mayo de 2006, que sostienen la
estabilidad laboral del trabajador y prohíben el despido injustificado, por tal motivo, acudió ante
el Director Departamental de Trabajo, a efecto de ser reincorporado a su fuente laboral, quien el
16 de enero de 2012, convocó al Rector de la mencionada Universidad en su calidad de Máxima
Autoridad Ejecutiva (MAE), del centro superior de estudios, a hacerse presente a la audiencia de
consideración de reincorporación, señalada para el 17 del mismo mes y año, a la que el
demandado no se hizo presente, situación que motivó al Director Departamental de Trabajo,
emita la conminatoria de reincorporación del trabajador el 24 de ese mes y año, que hasta la
fecha de presentación de la acción de amparo constitucional no fue cumplida.

Con dicho antecedente y tomando en cuenta lo establecido por el DS 28699, modificado por el
DS 0495 de 1 mayo de 2010, reglamentado por Resolución Ministerial (RM) 868/10 de 26 de
octubre, en vista de no existir otro medio o recurso legal ordinario que sea idóneo, eficaz e
inmediato para la protección del derecho a la estabilidad laboral, acudió a la presente acción
tutelar, demandado también al Rector de la Universidad Autónoma del Beni, pues pese a que no
fue él quien le despidió; empero, como MAE de esa institución en la que prestó sus servicios, es
única autoridad que puede disponer la reincorporación o el despido de los funcionarios de esa
Universidad y al negarse a cumplir la reincorporación dispuesta por la Dirección Departamental
de Trabajo, se deduce que su despido no sólo fue consentido por esta autoridad, sino, también
instruido.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Se señaló como vulnerado sus derechos a la estabilidad laboral y al debido proceso, citando al
efecto los arts. 49.III y 117.I de la CPE.

I.1.3. Petitorio

El accionante solicita que se deje sin efecto el ilegal despido y se ordene a las autoridades
universitarias -demandados- procedan a su reincorporación laboral de manera inmediata y se le
cancelen los salarios devengados y la condenación de costas procesales.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 9 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 42
a 43, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la demanda

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1090


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El abogado del accionante, ratificó íntegramente los términos de la acción tutelar presentada.

I.2.2. Informe de la autoridad y funcionario demandados

Luis Carlos Zambrano Aguirre, Rector de la Universidad Autónoma del Beni “José Ballivián”,
mediante informe escrito corriente de fs. 38 a 40 manifestó que de acuerdo al art. 92 de la CPE,
las universidades públicas, son autónomas en virtud a ello, administran sus recursos y nombran a
sus autoridades, personal docente y administrativo. En ese entendido, tomando en cuenta los
arts. 7.1, 14.1 y 14, 68 y 81 del Estatuto Orgánico de la Universidad Autónoma del Beni “José
Ballivián”, aprobado en razón a la disposición constitucional citada, que en concordancia con el
art. 410.II.3 de la CPE, tiene rango de ley por encima del art. 16 de la Ley General del Trabajo
(LGT), el rector de la universidad como MAE, se encuentra facultado de contratar y rescindir
contratos, con la única salvedad de sujetarse a la Ley General del Trabajo en cuanto al pago de
beneficios sociales cuando corresponda.

En consecuencia, lo que se realizó fue cumplir con el precepto constitucional y la Ley General
del Trabajo, al finalizar la relación laboral que existía entre el accionante y la institución a la que
el demandado representa, previo cumplimiento del plazo estipulado en el contrato suscrito entre
ambas partes, y si el accionante no estaba de acuerdo con dicha decisión, debió recurrir al
procedimiento administrativo que establecen los recursos de revocatoria y jerárquico aprobados
por Ley 2341 de 23 de abril de 2002, y no así ante la Jefatura Departamental de Trabajo y peor
aún a la presente acción de amparo constitucional sin agotar previamente las instancias legales
correspondientes, es decir los Juzgados del Trabajo y Seguridad Social, lesionando los
principios constitucionales de prelación normativa y reserva legal, como también los derechos
constitucionales a la defensa, al juez natural y a la “seguridad jurídica” entre otros.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, la Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia


del Beni, mediante Resolución 04/2012 de 9 de febrero, cursante de fs. 44 a 48, denegó la tutela
de la acción de amparo constitucional, con el fundamento que antes de activar la justicia
constitucional, el accionante debió exigir a la autoridad departamental de trabajo, el
cumplimiento de su Resolución; y en caso adverso, acudir a la jurisdicción laboral, presentando
la demanda de reincorporación, solicitando nuevamente el cumplimiento de la conminatoria. En
ese sentido, una vez agotada esa vía, de persistir la lesión a sus derechos, acudir a la instancia
constitucional. En consecuencia, debido al carácter subsidiario de la presente acción impide
conocer el fondo de la problemática demandada.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes arrimados al expediente, se llega a las
conclusiones siguientes:

II.1. El 1 de junio de 2011, el accionante firmó un contrato a plazo fijo con la MAE de la
Universidad Autónoma del Beni “José Ballivián”, para desempeñar el cargo de Sereno Diurno,
desde la firma del contrato hasta el 31 de diciembre de ese año (fs. 36 a 37).

II.2. El 24 de enero de 2012, el Jefe Departamental de Trabajo del Beni, emite conminatoria de
reincorporación laboral dirigida al Rector de la Universidad Autónoma del Beni “José
Ballivián”, para que en el plazo de tres días hábiles sea restituido Amilcar Pupuisiri Soliz, y se le

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1091


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

pague sueldos devengados y demás derechos sociales actualizados a la fecha de reincorporación


(fs. 2 a 3).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante manifestó que los demandados lesionaron sus derechos a la estabilidad laboral y al
debido proceso, alegando que fue despedido intempestivamente de su fuente laboral, sin la
existencia de un justificativo que avale tal decisión y que pese a que la Dirección Departamental
de Trabajo del Beni, conminó a la MAE de la Universidad Autónoma del Beni “José Ballivián”
a que se le restituya a su fuente laboral, no lo hicieron, manteniendo vigente el despido
intempestivo, forzado e injustificado en su contra. Correspondiendo analizar en revisión, si tales
argumentos son evidentes y si constituyen actos ilegales lesivos al derecho a la libertad del
accionante, a fin de otorgar o denegar la tutela solicitada.

III.1. De la acción de amparo constitucional

Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la presente acción


tutelar elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a dicha acción
instituida en el sistema constitucional boliviano; así, la Constitución Política del Estado, en la
Sección II, del Capítulo segundo (Acciones de Defensa) del Título IV (Garantías
Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte (Bases fundamentales del Estado -
derechos, deberes y garantías).

En ese marco, el art. 128 de la CPE, establece: “La Acción de Amparo Constitucional tendrá
lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona
individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos
reconocidos por la Constitución y la ley”; a su vez el art. 129.I de la CPE, determina que: “La
Acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea afectada, por otra a
su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la
Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados”.

En desarrollo de las normas constitucionales citadas, el art. 73 de la Ley del Tribunal


Constitucional Plurinacional (LTCP), al referirse al objeto de de la acción de amparo
constitucional, “…tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidas de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos y garantías reconocidos por la Constitución Política del Estado y la ley” y
que, al referirse el art. 76 de la citada Ley, con referencia a la subsidiariedad e inmediatez, “La
Acción de Amparo no procederá cuando exista otro medio o recurso legal para la protección
inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados”.

La acción de amparo constitucional, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que


la Ley Fundamental del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección cuyo
objeto es el restablecimiento inmediato y efectivo de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados, a través de un procedimiento judicial sencillo, rápido y expedito,
frente a situaciones de lesión provenientes de la acción u omisión de servidores públicos o
particulares; siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y
expedito para reparar la lesión producida.

III.2. De las reformas legales en materia laboral


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1092
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la misma manera, es necesario señalar que ante un posible despido injustificado, se instituyó
la posibilidad de que el trabajador recurra ante el Ministerio de Trabajo para pedir su restitución,
así lo establecía el art. 10.I del DS 28699, que indica: “cuando el trabajador sea despedido por
causas no contempladas en el art. 16 de la Ley General del Trabajo, podrá optar por el pago de
beneficios sociales o por su reincorporación”; señalando posteriormente el mismo artículo en su
parágrafo III: “En caso de que el trabajador opte por su reincorporación, podrá recurrir a este
efecto ante el Ministerio de Trabajo, donde una vez probado el despido injustificado, se
dispondrá la inmediata reincorporación”.

En ese sentido, la jurisprudencia constitucional, así señaló: “de los antecedentes citados, se
evidencia a momento de la emisión de las Resoluciones ahora impugnadas, la vigencia del DS
28699, que otorga al trabajador el derecho de optar, por el pago de sus beneficios sociales o
por su reincorporación en los casos de despidos injustificados; norma que fue reglamentada,
mediante RM 551/06, que establece el procedimiento administrativo que debe desarrollarse
para los casos de reincorporación laboral; en tal sentido, en el presente caso, el trabajador
acudió ante la Jefatura Departamental del Trabajo, solicitando la reincorporación a su fuente
laboral, en virtud de aquello, y la normativa vigente a momento de dicha petición, el Jefe
Departamental del Trabajo, con la competencia que le confiere el Decreto y su Reglamento
referido, pronunció la RA 661-07, que ordena la reincorporación del trabajador a la CNS y la
RA 602-07, que resuelve el recurso de revocatoria respectivo, razón por la cual, esta autoridad
se limitó a cumplir con los procedimientos y facultades establecidas legalmente, en los casos
que el trabajador opte por su reincorporación por la vía administrativa, sin que ello importe
que el trabajador pueda acudir a la justicia ordinaria ante el Juez de Trabajo y Seguridad
Social, como el propio Reglamento prevé en su art. 10 al indicar: '…En el caso de negativa del
empleador, el Ministerio de Trabajo impondrá multa por infracción a leyes sociales, pudiendo
el trabajador iniciar la demanda de Reincorporación ante el Juez de Trabajo y Seguridad
Social con la prueba del despido injustificado por el Misterio de Trabajo'" . (SC 0002/2010 de
20 de septiembre), la cita jurisprudencial glosada, permite establecer que un trabajador puede si
así lo desea -toda vez que le es facultativa y potestativa dicha elección- acudir ante el Ministerio
de Trabajo Empleo Previsión Social para solicitar su reincorporación, por la vía administrativa,
ello concordante con el art. 50 de la CPE, que prevé que: “El Estado, mediante tribunales y
organismos administrativos especializados, resolverá todos los conflictos emergentes de las
relaciones laborales entre empleadores y trabajadores…” entonces, solicitar la reincorporación a
la fuente laboral a través del referido Ministerio, constituye acudir ante la vía administrativa
cuyo último acto procesal sería la resolución definitiva del Ministerio de Trabajo Empleo y
Previsión Social que en su caso, ordenaría la reincorporación del trabajador a su fuente laboral,
señalando por otra parte, el art. 10 del DS 28699, señala que ante una posible negativa de
reincorporación por parte del empleador, el trabajador podría acudir a la vía ordinaria.

Debe precisarse que la cita jurisprudencial precedente está referida a la vigencia del DS 28699,
sin considerar el DS 0495 de 1 de mayo de 2010, que la complementa y reconoce al Ministerio
de Trabajo Empleo Previsión Social, a través de las Jefaturas Departamentales y Regionales de
Trabajo, la facultad de instruir la reincorporación de los trabajadores a sus fuentes laborales. Al
efecto, el DS 0495, establece lo siguiente:

“ARTÍCULO ÚNICO.-

I. Se modifica el Parágrafo III del Artículo 10 del Decreto Supremo N°28699, de 1 de mayo de
2006, con el siguiente texto:
`III. En caso de que el trabajador opte por su reincorporación podrá recurrir a este efecto ante el
Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social, donde una vez constatado el despido
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1093
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

injustificado, se conminará al empleador a la reincorporación inmediata al mismo puesto que


ocupaba la trabajadora o trabajador al momento del despido, más el pago de los salarios
devengados y demás derechos sociales que correspondan a la fecha de la reincorporación, a
través de las Jefaturas Departamentales y Regionales de Trabajo´.

II. Se incluyen los Parágrafos IV y V en el Artículo 10 del Decreto Supremo N° 28699, de 1 de


mayo de 2006, con los siguientes textos:

`IV. La conminatoria es obligatoria en su cumplimiento a partir de su notificación y únicamente


podrá ser impugnada en la vía judicial, cuya interposición no implica la suspensión de su
ejecución´.

V. Sin perjuicio de lo dispuesto en el Parágrafo IV del presente Artículo, la trabajadora o


trabajador podrá interponer las acciones constitucionales que correspondan, tomándose en
cuenta la inmediatez de la protección del derecho constitucional de estabilidad laboral´.

En ese contexto, la SC 1354/2011-R de 30 de septiembre, que resuelve el caso de una


trabajadora que fue despedida de manera injustificada de su fuente laboral, acudiendo
directamente a la jurisdicción constitucional para la restitución de sus derechos y garantías;
señalando el Tribunal Constitucional en dicho caso, que al encontrarse vigente el DS 28699 de 1
de mayo de 2006, así como el DS 0495, que otorga al trabajador un medio idóneo, rápido y
eficaz para la restitución de sus derechos laborales a través del Ministerio de Trabajo Empleo y
Previsión Social y sus dependencias, antes de acudir a la jurisdicción constitucional, debía en
primera instancia, agotar dicho medio idóneo, es decir, primero acudir ante el aludido Ministerio
de trabajo, agotando de esta forma la jurisdicción administrativa, para posteriormente y en caso
de persistir la lesión a sus derechos, acudir ante la jurisdicción constitucional.

El citado precedente, textualmente señala:“El DS 28699 de 1 de mayo de 2006, en su art. 10.III


vigente al momento de la problemática, ahora modificado por el DS 0495 de 1 de mayo de
2010, reconoce al Ministerio de Trabajo como instancia a la que los trabajadores despedidos
pueden acudir para solicitar su reincorporación, que una vez probada puede ser ordenada por
ese despacho ministerial, advirtiéndose en el presente caso que la trabajadora no utilizó ningún
medio impugnativo al interior de la entidad o instancias superiores como ya se ha referido
precedentemente, en el caso de autos correspondía al Ministerio de Trabajo, Empleo y
Previsión Social; en consecuencia, para que los fundamentos de una demanda de amparo
constitucional puedan ser en el fondo, `la parte accionante debe haber utilizado hasta agotar
todos los medios y recursos legales idóneos para la tutela de sus derechos sea en la vía
jurisdiccional o administrativa, pues donde se deben reparar los derechos y garantías
lesionados es en el mismo proceso, o en la instancia donde fueron vulnerados, esto es, que en
principio haya acudido ante la misma autoridad que incurrió en la presunta lesión y luego a las
superiores a ésta, y si a pesar de ello persiste la lesión porque los medios o recursos utilizados
resultaron ineficaces, recién se abre la posibilidad de acudir al amparo constitucional, el que
no puede ser utilizado como un mecanismo alternativo o sustitutivo de protección, pues ello
desnaturalizaría su esencia´ (SC 0360/2010-R de 22 de junio).

(…) Por lo señalado, en la problemática expuesta se establece que la accionante no utilizó un


medio idóneo, inmediato y eficaz que tenía a su alcance para la protección de sus derechos
acusados de vulnerados a través de la presente acción tutelar, situación que recae en la causal
de improcedencia por subsidiariedad, establecida en la sub regla 2. b) de la SC 1337/2003-R,
glosada en el Fundamento Jurídico III.1, de la presente Sentencia”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1094


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De lo expuesto, se puede establecer que con la resolución de reincorporación por parte del
Ministerio de trabajo se acaba con la vía administrativa, pudiendo acudir el trabajador ante la
justicia ordinaria, siendo dicha opción optativa del trabajador antes de acudir a la vía
constitucional, toda vez que, conforme la jurisprudencia constitucional, una vez agotada la vía
administrativa, no se necesita agotar también la vía ordinaria, para acudir a la jurisdicción
constitucional ya que la vía administrativa y la ordinaria son dos vías diferentes.

Ahora bien, si en materia laboral, es permitido a la trabajadora o al trabajador solicitar su


reincorporación por la vía administrativa ante el Ministerio del ramo, y existiendo una
resolución que ordena la reincorporación a la fuente laboral, debe estimarse la misma como el
fin de la vía administrativa, y ante una negativa por parte del empleador, se abre la posibilidad
de que el trabajador acuda a la vía ordinaria, o conforme jurisprudencia, acuda en acción de
amparo constitucional para que se le restituyan sus derechos, sin tener que agotar la vía judicial
con carácter previo, más aún cuando existen normas que así le faculta al trabajador, en este caso,
los DDSS 28699 y 0495.

III.3. De la presunción de constitucionalidad y de la protección a los trabajadores

Por otra parte, se debe establecer que conforme lo señala el art. 5 de la LTC, se presume la
constitucionalidad de toda ley, decreto, resolución y actos de los Órganos del Estado en todos
sus niveles, hasta tanto el Tribunal Constitucional Plurinacional resuelva y declare su
inconstitucionalidad. En ese sentido y en lo que respecta a la aplicación de los decretos antes
citados que ordenan la reincorporación de un trabajador despedido por causas no previstas en la
ley, cabe mencionar que la antes citada SC 0002/2010, indica lo siguiente: “…en consecuencia,
el Ministerio de Trabajo y sus jefaturas departamentales, tenían plena competencia para
tramitar y resolver la solicitud de reincorporación, ahora cuestionado, de acuerdo con en el DS
28699 y la RM 551/06, quedando las autoridades recurridas facultadas para emitir
resoluciones de reincorporación del trabajador, en el ámbito de la competencia ya señalada”,
jurisprudencia que fue ampliada mediante la SC 1354/2011-R que señaló “El DS 28699 de 1 de
mayo de 2006, en su art. 10.III vigente al momento de la problemática, ahora modificado por el
DS 0495 de 1 de mayo de 2010, reconoce al Ministerio de Trabajo como instancia a la que los
trabajadores despedidos pueden acudir para solicitar su reincorporación, que una vez probada
puede ser ordenada por ese despacho ministerial, advirtiéndose en el presente caso que la
trabajadora no utilizó ningún medio impugnativo al interior de la entidad o instancias
superiores como ya se ha referido precedentemente, en el caso de autos correspondía al
Ministerio de Trabajo, Empleo y Previsión Social; en consecuencia, para que los fundamentos
de una demanda de amparo constitucional puedan ser analizados en el fondo, `la parte
accionante debe haber utilizado hasta agotar todos los medios y recursos legales idóneos para
la tutela de sus derechos sea en la vía jurisdiccional o administrativa, pues donde se deben
reparar los derechos y garantías lesionados es en el mismo proceso, o en la instancia donde
fueron vulnerados, esto es, que en principio haya acudido ante la misma autoridad que incurrió
en la presunta lesión y luego a las superiores a ésta, y si a pesar de ello persiste la lesión
porque los medios o recursos utilizados resultaron ineficaces, recién se abre la posibilidad de
acudir al amparo constitucional, el que no puede ser utilizado como un mecanismo alternativo o
sustitutivo de protección, pues ello desnaturalizaría su esencia´.

Como se tiene establecido, las Universidades Públicas se rigen por la Ley General del Trabajo,
por consiguiente, dentro el orden laboral se debe entender a esta norma y sus disposiciones
reglamentarias como las que rijan la actividad laboral en las Universidades Públicas, que debe
sujetarse a la Norma Fundamental y las leyes, sin vulnerar derechos fundamentales.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1095


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.4. Del análisis de caso concreto

De acuerdo a la documentación que informa los antecedentes del expediente, se evidencia que el
accionante acudió ante la Dirección Departamental del Trabajo, dependiente del Ministerio de
Trabajo Empleo y Previsión Social, la misma que emitió la conminatoria de reincorporación de
24 de enero de 2012, para que la Universidad Autónoma del Beni reincorpore al accionante, lo
cual fue incumplido, situación que, de acuerdo a lo expresado en los fundamentos precedentes y,
fundamentalmente, porque de acuerdo con lo previsto por el art. 48.II de la CPE, las normas
laborales se interpretarán y aplicarán bajo los principios de protección de las trabajadoras y de
los trabajadores como principal fuerza productiva de la sociedad; de primacía de la relación
laboral; de continuidad y estabilidad laboral; de no discriminación y de inversión de la prueba a
favor de la trabajadora y del trabajador, resulta imperativo aplicar, interpretar y pronunciarse
favorablemente respecto los derechos laborales que pudieran ser vulnerados, más aun cuando la
parte demandada incumplió la conminatoria de reincorporación emitida por el Ministerio de
Trabajo, Empleo y Previsión Social.

En tal sentido, se concluye que el Tribunal de garantías, al denegar la tutela, no ha evaluado


correctamente los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art.
12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución 04/2012 de 9 de febrero,
cursante de fs. 44 a 48, pronunciada por la Sala Social y Administrativa del Tribunal
Departamental de Justicia del Beni, constituida en Tribunal de garantías; y, en consecuencia,
CONCEDER la tutela.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma .-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0139/2012


Sucre, 4 de mayo de 2012

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Mag. Relator: Efren Choque Capuma
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00218-2012-01 - AAC
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 05/2012 de 24 de febrero, cursante de fs. 98 a 99 vta., pronunciada,


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Mericia Isita Alvarado contra
Humberto Parary Rioja, Elva Navia Gómez actual Directora del Servicio Departamental
de Educación (SEDUCA respectivamente), María Luisa Gutiérrez Salvatierra, Directora
Distrital de Educación Santa Ana de Yacuma; Marcos Padilla Hurtado, Lucia Monje
Navia Miembros del Tribunal Disciplinario, todos del Beni.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1096
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 13 de febrero de 2012, cursante de fs. 20 a 25, la accionante expone
los siguientes fundamentos:

I.1.1. Fundamentos de hecho que motivan la acción

La accionante manifiesta que, estando ejerciendo el cargo de Directora de la Unidad Educativa


“Silenia Barba Téllez”, se presentó a una convocatoria pública del Ministerio de Educación “y
Culturas”, para optar al cargo de Directora Distrital de Educación de Santa Ana de Yacuma,
evaluación realizada en el mes de noviembre de 2011, donde obtuvo la mayor nota.

A partir de ese momento, María Luisa Gutiérrez Salvatierra, Directora Distrital de Educación
Urbana, inicia una serie de acciones tendientes a inhabilitarla al cargo que postuló, para lo cual
son utilizadas Lucia Monje Navia y Marcos Padilla Hurtado, con quienes conforman un
inquisitorial Tribunal Disciplinario Administrativo, que dictó el Auto de procesamiento en su
contra el 6 de diciembre del año “2006” (2011), con el que nunca fue notificada, todo esto
producto de una denuncia de abandono a su fuente de trabajo, y por el que fue destituida de su
cargo mediante “Sentencia” dictada en su contra por dicho Tribunal, Resolución que fue
apelada.

Refiere que, Humberto Parari Rioja, en su condición de Director del SEDUCA Beni, emitió el
“Auto de apelación” TAD-01/12 de 25 de enero de 2012, confirmando la Sentencia apelada;
ratificando la restricción y privación de sus derechos constitucionales, debido a que los otros dos
miembros que fungieron como parte del Tribunal Disciplinario, con excepción de la Directora
Distrital, no tenían ninguna autoridad ni facultad que emane de la ley.

De acuerdo a lo previsto por el “art. 62.IV” del Reglamento de la Carrera Administrativa del
Servicio a la Educación Pública -añade la accionante- el Tribunal Administrativo en las
organizaciones del Servicio de Educación Pública (SEP), será conformado por: a) Un técnico
asignado por la Dirección del SEDUCA; b) Un representante de la Junta de Distrito; y, c) El
Director Distrital.

Señala además que dicho Tribunal Disciplinario es totalmente ilegal, carente de toda
competencia para procesarla, sentenciarla y destituirla de su cargo de Directora de la Unidad
Educativa “Silenia Barba Téllez”, puesto que ninguno de ellos es técnico designado por
SEDUCA, “tampoco son de Santa Ana de Yacuma”. Por otra parte, el Director de SEDUCA del
Beni, no se ha pronunciado sobre la irregular composición del Tribunal Disciplinario.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante alega la vulneración de sus derechos a la dignidad, a la petición, al debido proceso y a


la “seguridad jurídica”, citando al efecto los arts. 22, 46, 115, 117, 119 y 122 de la Constitución
Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

La accionante solicita se conceda la tutela demandada y se disponga la nulidad del Auto de


procesamiento disciplinario, de 6 de diciembre de “2006”, la Sentencia 01 de 5 de enero de 2012
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1097
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

y del Auto de apelación TAD-01/12; en consecuencia, se le restituya a su fuente de trabajo en la


Dirección de la Unidad Educativa “Silenia Barba Téllez”, con asiento en Santa Ana de Yacuma,
con responsabilidad civil y penal, más la condenación de costas judiciales.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 24 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante a fs. 97
y vta., con la presencia del abogado de las codemandadas Elva Navia Gómez y María Luisa
Gutiérrez Salvatierra, ausentes los codemandados Marcos Padilla Hurtado y Lucia Monje Navia,
se produjeron los siguientes actuados:

I.2.2. Informe de los servidores públicos y personas demandadas

El abogado de Elva Navia Gómez y María Luisa Gutiérrez Salvatierra, de manera verbal en
audiencia señaló que se alega que un Tribunal que no tiene competencia habría dictado la
Resolución Administrativa por la cual se destituye del cargo que ocupaba la ahora accionante;
sin embargo, la acción de amparo constitucional no es la vía para reponer los actos dictados por
un tribunal que no tiene competencia. El A C 0012/2010 RCA de 19 de abril, refiere que en los
procesos judiciales la vía del amparo constitucional se activa en los supuestos en que se
produzca una severa lesión al derecho al debido proceso en cualquiera de sus elementos, excepto
cuando la actuación de un juez o tribunal judicial se encuadra en los supuestos jurídicos
previstos por el “art 31 de la Constitución”, casos en los que se activa la vía del recurso directo
de nulidad.

I.2.3. Resolución

Concluida la audiencia, los Vocales de la Sala Social y Administrativa del Tribunal


Departamental de Justicia del Beni, constituido en Tribunal de garantías, pronunciaron
Resolución 05/2012 de 24 febrero, cursante de fs. 98 a 99 vta., por el cual denegaron la tutela
solicitada, por la accionante con los siguientes fundamentos: 1) Aquellos actos o resoluciones
adoptadas por funcionarios o autoridades públicas, incluidas las judiciales, que usurpen
funciones o no tengan jurisdicción ni competencia, no pueden ser impugnados por la vía del
amparo constitucional debido a que existe otro mecanismo reconocido por el legislador; 2) La
irregularidad denunciada corresponde ser activada de acuerdo a lo previsto por el art. 157 de la
Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), por lo que la accionante equivocó el
camino en su afán de reclamar la vulneración de sus derechos constitucionales, correspondiendo
su improcedencia; 3) Lo que la accionante reclama es que el Tribunal disciplinario que le
sentenció es ilegal y por tanto nulos sus actos por usurpar funciones que no les competen,
nulidad que no puede ser buscada a través de la presente acción y, 4) Debido a que la accionante
puso en tela de juicio la competencia y legalidad del Tribunal disciplinario, no ingresaron a
considerar las demás denuncias, como la supuesta falta de notificación entre otras, por lo que, si
bien corresponde la improcedencia, “dada la etapa procesal” en la que se encuentran, determinan
denegar la tutela solicitada.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las siguientes conclusiones:

II.1. El 12 de marzo de 2010, en reunión con representantes de las Juntas Escolares de Santa
Ana de Yacuma, convocados por la Directora Distrital de Educación, María Luisa Gutiérrez
Salvatierra, en coordinación con Héctor Lobo Vargas en su calidad de Presidente de la Junta
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1098
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Distrital de Padres de Familia, se nombró el Tribunal disciplinario constituido por María Luisa
Gutiérrez Salvatierra en su calidad de Directora Distrital, Marcos Padilla Hurtado y Rufina Cayú
de Neira en representación de los padres de familia, esta última renunció a su cargo mediante
nota cursante a fs. 53, y la misma fue remplazada por Lucia Monje Navia, en reunión realizada
el 29 de julio de 2011 (fs. 51, 52 y 54 vta.).

II.2. Mediante Auto de procesamiento 05/2011 de 6 de diciembre, fue instaurado proceso


administrativo contra Merecía Isita Alvarado, Directora de la Unidad Educativa “Silenia Barba
Téllez”, por haber supuestamente proporcionado información incorrecta o adulterada a los
niveles de Organización del Sistema de Información Educativa y por el abandono injustificado
de sus funciones por tres días continuos, insertas como faltas en los arts. 52 inc. k) y 70 inc. c)
del Reglamento de la Carrera Administrativa del SEP (fs. 56 a 57).

II.3. Mediante Sentencia 01/2012 de 5 de enero, el Tribunal Disciplinario falló declarando


culpable a la accionante, de las faltas tipificadas en los arts. 52 inc. k) y 70 inc. c) del
Reglamento de la Carrera Administrativa del Servicio de Educación Publica, imponiéndole la
sanción de destitución del cargo (fs. 6 a 12.)

II.4. Dándose por notificada con la Resolución dictada en su contra, la accionante mediante
memorial de 14 de enero de 2012, presentó recurso de apelación pidiendo que el superior en
grado revoque la Resolución impugnada (fs. 13 a 15 vta.).

II.5. Mediante Auto de apelación TAD - 01/12 de 25 de enero de 2012, el Director de SEDUCA
del Beni confirmó la Resolución 01/2011, por no haber encontrado ningún vicio dentro del
procedimiento (fs. 16 a 18).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante, denuncia la vulneración de sus derechos a la dignidad, a la petición, al debido


proceso y a la “seguridad jurídica”, por cuanto fue destituida del ejercicio de sus funciones del
cargo de Directora de la Unidad Educativa “Silenia Barba Téllez”, por un Tribunal disciplinario
integrado por personas cuya constitución contempla a personas que no son las llamadas por ley
para sustanciar el proceso administrativo en su contra; así como, en grado de apelación, no
haberse observado por parte del Director del SEDUCA, las irregularidades denunciadas.
Consiguientemente, corresponde a este Tribunal analizar en revisión, si los hechos denunciados
son evidentes y sí en el caso concreto los demandados vulneraron los derechos de la accionante.

III.1. De la acción de amparo constitucional

Antes de entrar a la consideración sobre la resolución y antecedentes de la presente acción


tutelar elevada en revisión, es pertinente, referirse a algunos aspectos inherentes a dicha la
acción de amparo constitucional instituida en la Norma Fundamental, con relación, a la
naturaleza de la institución jurídica constitucional.

La Constitución Política del Estado, en la Sección II, del Capítulo segundo (Acciones de
Defensa) del Título IV (Garantías Jurisdiccionales y Acciones de Defensa) de la Primera Parte
(Bases fundamentales del Estado - derechos, deberes y garantías) ha instituido la acción de
amparo constitucional. En ese marco, el art. 128 establece: “La Acción de Amparo
Constitucional tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores
públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir los derechos reconocidos por la Constitución y la ley”. A su vez el art. 129.I de la CPE,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1099
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

resalta que: “La Acción de Amparo Constitucional se interpondrá por la persona que se crea
afectada, por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de
acuerdo con la Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados”.

El art. 73 de la LTCP, al referirse al objeto de la acción de amparo constitucional, señala lo


siguiente: “La Acción de Amparo Constitucional tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o
indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan,
supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías reconocidos por la
Constitución Política del Estado y la ley”.

La acción de amparo constitucional, en consecuencia, es un mecanismo constitucional por el que


la Ley suprema del ordenamiento jurídico establece un procedimiento de protección cuyo objeto
es el restablecimiento inmediato y efectivo de los derechos y garantías restringidos, suprimidos
o amenazados, a través de un procedimiento judicial sencillo, rápido y expedito, frente a
situaciones de lesión provenientes de la acción u omisión de servidores públicos o particulares;
siempre que el ordenamiento jurídico ordinario no prevea un medio idóneo y expedito para
reparar la lesión producida.

III.2.De la protección de los derechos fundamentales en general y de la justicia material y


su prevalencia en relación a la justicia formal para casos de manifiestas vulneraciones a
derechos fundamentales

La Constitución Política del Estado, como norma suprema del ordenamiento, señala que Bolivia
se constituye en un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, y define
como uno de los fines esenciales del Estado, el garantizar el cumplimiento de los principios,
valores, derechos y deberes reconocidos y consagrados por ella. La voluntad del constituyente
en este sentido, hizo que la Constitución configure la protección de los derechos fundamentales
y garantías constitucionales de las personas y de las naciones y pueblos indígenas originario
campesinos como uno de los ejes más importantes del Estado.

Para hacer efectivos estos derechos y no queden los mismos como simples enunciados, se ha
instituido la acción de amparo constitucional (antes instituida como “recurso de amparo
constitucional”), así como, por otra parte, el Tribunal Constitucional Plurinacional, como el
Órgano llamado a precautelar el respeto y vigencia de los derechos y garantías constitucionales.

Igualmente, es necesario señalar que la Constitución Política del Estado, además de establecer
que ella goza de primacía frente a cualquier otra disposición normativa, de acuerdo con lo
previsto por el art. 410.II de la CPE, determina que el bloque de constitucionalidad está
integrado por los tratados y convenios internacionales en materia de Derechos Humanos
(además de las normas de Derecho Comunitario). En ese mismo contexto, de acuerdo al art. 13
CPE, inserto en el Capítulo relativo a los Derechos Fundamentales y Garantías; los Tratados y
Convenios Internacionales ratificados por la Asamblea Legislativa Plurinacional, que reconoce
los derechos humanos, prevalecen en el orden interno y, además, que los derechos y deberes
consagrados en la Norma Fundamental se interpretaran de conformidad con los tratados
internacionales de derechos humanos ratificados por Bolivia.

Con relación al debido proceso, la Constitución Política del Estado en el Capítulo Primero de las
Garantías Jurisdiccionales, del Título IV de la Primera Parte, en el art. 115.II señala que: “El
Estado garantizará el derecho al debido proceso…” así como en el art. 117.I prevé que: “ninguna
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1100
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

persona puede ser condenada sin haber sido oída y juzgada previamente en un debido
proceso...”.

En lo que concierne a instrumentos internacionales, cabe mencionar en primer lugar a la


Declaración Universal de Derechos Humanos aprobada por la Asamblea General de las
Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948 en su Resolución 217 A (III), cuyo art. 10, sobre el
derecho a ser oído, establece: “toda persona tiene Derecho, en condiciones de plena igualdad, a
ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial para la
determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra
ella en materia penal”.

En el mismo sentido, la Convención Americana sobre Derechos Humanos o Pacto de San José
de Costa Rica, de 22 de noviembre de 1969, ratificada por Bolivia mediante Ley 1430 de 11 de
febrero de 1993, en su art. 8, sobre las garantías judiciales indica entre otros puntos, el que: “1.
Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable,
por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la
ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella, o para la
determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro
carácter (…)”.

Del mismo modo, el art. 14.1 del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos, señala
que: “Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda persona tendrá
derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un tribunal competente,
independiente e imparcial, establecido por la ley, en la substanciación de cualquier acusación de
carácter penal formulada contra ella o para la determinación de sus derechos u obligaciones de
carácter civil. La prensa y el público podrán ser excluidos de la totalidad o parte de los juicios
por consideraciones de moral, orden público o seguridad nacional en una sociedad democrática,
o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la medida estrictamente
necesaria en opinión del tribunal, cuando por circunstancias especiales del asunto la publicidad
pudiera perjudicar a los intereses de la justicia; pero toda sentencia en materia penal o
contenciosa será pública, excepto en los casos en que el interés de menores de edad exija lo
contrario, o en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la tutela de menores”.

De otro lado, refiriéndose la vigencia del nuevo modelo de Estado y al mandato expreso de velar
por el respeto y la vigencia de los derechos y garantías constitucionales, así lo establece el art.
196 de la CPE, establece que: “(…) no puede consentir actos que impliquen una manifiesta y
grosera violación a derechos fundamentales, por ser estos contrarios al pilar estructural del
Estado “.

En ese marco, corresponde señalar, de igual modo que el principio pro-actione se configura
como una pauta esencial no solo para la interpretación de derechos fundamentales, sino también
como una directriz esencial para el ejercicio del Órgano de control de constitucional y la
consolidación del mandato inserto en el art. 1 de la CPE; además, asegura el cumplimiento
eficaz de los valores justicia e igualdad material, postulados axiomáticos directrices del nuevo
modelo de Estado y reconocidos de manera expresa en el Preámbulo de la Constitución Política
del Estado y en el art. 8.1 también del texto constitucional.

En efecto, el principio pro-actione, asegura que a través de la ponderación de los derechos para
el análisis de los casos concretos en los cuales exista una manifiesta, irreversible y grosera
vulneración a derechos fundamentales, debe prevalecer la justicia material a cuyo efecto, su
labor hermenéutica de ponderación, generará la flexibilización a ritualismos extremos para que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1101
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

en casos graves se repare un derecho manifiesta y groseramente vulnerado, así, el rol del control
de constitucionalidad, en virtud del cual, la justicia formal ceda frente a la justicia material.

III.3. Análisis del caso concreto.

De acuerdo con la documentación que informan los antecedentes del expediente se evidencia
que la accionante, en su calidad de Directora de Núcleo, fue sometida a un Tribunal disciplinario
constituido por María Luisa Gutiérrez Salvatierra en su calidad de Directora Distrital, Marcos
Padilla Hurtado y Lucia Monje Navia en representación de los padres de familia, cuando, de
acuerdo con el Reglamento de la Carrera Administrativa del Servicio de Educación Pública,
referido a la constitución del tribunal administrativo, determina que para el caso de someter a un
Director de Núcleo, éste estará constituido por un representante de la Junta de Núcleo, otro de la
Junta de Distrito y un técnico asignado por la Dirección de SEDUCA, previsión normativa a la
que no se dio cumplimiento y por el contrario fue sometida a un proceso administrativo en el
que las autoridades no eran las llamadas a conocer, sustanciar y resolver dicho proceso
administrativo; el mismo que, sin embargo, determinó la destitución de la accionante, lo que fue
confirmado en alzada, sin advertir la ilegalidad de la constitución del Tribunal administrativo;
lesionándose en ambos casos, el derecho de la accionante a que en el proceso administrativo al
que fue sometida, sea sustanciado por autoridades cuya competencia es con anterioridad al
hecho que motiva el proceso.

En casos similares, el Órgano llamado a precautelar el respeto y vigencia de los derechos y


garantías constitucionales, ha establecido lo siguiente:

“Establecido el régimen legal aplicable al caso, corresponde dejar establecido, que el proceso
administrativo instaurado contra la hoy actora, debió organizarse y tramitarse, conforme a las
previsiones contenidas en el Reglamento sobre las Carreras en el Servicio de Educación
Pública, instituido mediante DS 23968 de 24 de febrero de 1995 y aprobado por la RM 062/00
de 17 de febrero de 2000; lo que no ocurrió en el caso examinado (…), en contravención a lo
que dispone el art. 62.II del ya citado Reglamento de la Carrera Administrativa del Servicio de
Educación Pública. Por otra parte, la autoridad recurrida, no obstante de la apelación
interpuesta por la recurrente, conoció la Resolución pronunciada por el Tribunal Disciplinario
en grado de revisión, sin considerar que los arts. 65, 66 y 67 de este Reglamento contemplan el
recurso de apelación contra los fallos que se dicten en los procesos administrativos” (así la SC
1787/2004-R de 12 de noviembre, entre otras).

Por otra parte, siguiendo en lo esencial el entendimiento de lo señalado en el fundamento


jurídico III.2, frente a una grosera, irreversible y manifiesta lesión a la garantía de competencia,
las formalidades o presupuestos procesales para la activación del control de constitucionalidad,
deben flexibilizarse, por cuanto este aspecto de manera excepcional podrá aperturarse a través
de la acción de amparo constitucional para evitar así un grave e irreparable atentado a la garantía
de la competencia y por ende a las reglas del debido proceso, por lo que, tomando en cuenta lo
precedentemente señalado, al haberse evidenciado que los servidores públicos y las personas
demandadas han obrado al margen de lo que establece el Reglamento de la Carrera
Administrativa del Servicio de Educación Pública, e incluso, en apelación, ignorado sobre los
extremos expuestos sobre la ilegal constitución del Tribunal administrativo, se constata de igual
forma, la lesión al debido proceso, consagrado por la Constitución Política del Estado y normas
del ordenamiento jurídico internacional, en materia de Derechos Humanos, señaladas
específicamente en el Fundamento jurídico III.2 de la presente Sentencia, por lo que corresponde
otorgar la tutela solicitada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1102


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De lo expresado precedentemente, la situación planteada se encuentra dentro las previsiones y


alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías, al haber
denegado la tutela, no efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes procesales ni dio
correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada; en virtud de la


autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia, y el art.
12.7 de la LTCP, en revisión, resuelve:

1° REVOCAR la Resolución 05/2012 de 24 de febrero, cursante de fs. 98 a 99 vta.,


pronunciada por la Sala Social y Administrativa del Tribunal Departamental de Justicia del
Beni; y, en consecuencia CONCEDER la tutela solicitada.

2º Se dispone se organice un nuevo proceso administrativo disciplinario contra la accionante, de


acuerdo a ley.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Efren Choque Capuma.-Magistrado.


Soraida Rosario Chánez Chire.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0140/2012


Sucre, 9 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00087-2012-01-AAC
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 06 de 2 de febrero de 2012, cursante de fs. 97 a 100, pronunciada dentro


de la acción de amparo constitucional interpuesta por Francisco Vedia Aldana contra Daniel
Quispe Manchego, Director Distrital de Educación III y Bartolomé Puma Velásquez,
Director Departamental de Educación ambos de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante mediante memorial presentado el 19 de enero de 2012, cursante de fs. 69 a 77 vta.,


manifestó que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Señala que es profesor con más de veinte años de ejercicio profesional en el Magisterio y que en su
condición de Director del nivel secundario de la Unidad Educativa “Buenas Nuevas” de la ciudad de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1103
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Santa Cruz, con una hoja de vida sin tacha y con el reconocimiento de autoridades, padres de familia y
estudiantes constituidos en Juntas Escolares y Juntas Vecinales, decidió generar y consolidar un
ambicioso y a la vez noble proceso de integración con la Comunidad Educativa del barrio “Unión”, que
se encuentra en la zona del Plan 3000, proyecto que se emprendió con éxito con el apoyo de la Misión
Sueca Libre en Bolivia. Sin embargo, como emergencia que Fanny Hurtado Paz, -quien también trabajó
en el mencionado proyecto y, por lo mismo, conocedora del destino de los recursos recaudados-,
denunció ante la Dirección Distrital de Educación III de la ciudad de Santa Cruz una serie de hechos
infundados relativos a supuestas exacciones a los padres de familia situación que motivó se inicie
proceso sumario administrativo interno en su contra.

Dentro de la sustanciación del proceso sumario referido, el 25 de abril de 2011 fue notificado con la
Resolución Administrativa (RA) 007/21-04-2011 (Auto Final de proceso disciplinario administrativo),
emitido por el Tribunal Disciplinario Administrativo de la referida Dirección, por el cual se le hizo
conocer que fue retirado de sus funciones como Director del nivel secundario de la Unidad Educativa
“Buenas Nuevas”, cargo que ostentaba fruto de un proceso de institucionalización y se le aplicó la
sanción de descenso a un cargo inferior.

Contra dicha Resolución interpuso recurso de revocatoria que fue resuelto por RA024/2011 de 7 de
mayo, notificada con dos tenores diferentes, ratificando el fallo emitido por el Tribunal
Disciplinario Administrativo de la Dirección Distrital de Educación III del departamento de Santa
Cruz, fallo que al ser lesivo a sus intereses impugnó a través de recurso jerárquico el 5 de julio de
2011, el cual concluyó con el silencio administrativo positivo por parte del Ministerio de
Educación, por haber pasado noventa días hábiles sin que dicha autoridad hubiera pronunciado
resolución, quedando ejecutoriado y con calidad de cosa juzgada. Es decir, al haber sido
presentado el recurso jerárquico el 5 de julio de 2011, sus efectos se produjeron el 11 de noviembre
del mismo año, fecha en la que caducó el plazo establecido de noventa días hábiles administrativos
con que contaba dicha autoridad para resolver expresamente el recurso jerárquico interpuesto. Sin
embargo, el Director Distrital de Educación III de Santa Cruz, no cumplió ni ejecutó lo tácitamente
determinado por el referido Ministerio de Educación, conforme prueba con la carta notariada
remitida el 12 de diciembre del citado año.

No obstante haber solicitado pronunciamiento respecto de la Resolución del recurso jerárquico


mediante carta notariada de 7 de diciembre de 2011, sin embargo, supuestamente se le notificó en
el domicilio de su abogada con la Resolución de negativa por improcedencia del recurso jerárquico
035/2011 de 18 de julio, esa misma fecha, cuando la indicada diligencia debió realizarse en su
domicilio señalado en el recurso jerárquico, quedando evidente que dicha Resolución y
notificación no existieron nunca.

Además, refiere que la Resolución en mención carece de validez porque fue firmada por la misma
autoridad que resolvió el recurso de revocatoria, es decir, el Director Departamental de Educación
(ex SEDUCA) quien debió haber remitido el recurso jerárquico ante el Ministro de Educación,
autoridad competente para resolver el mismo en cumplimiento del art. 66.III de la Ley de
Procedimiento Administrativo (LPA). Se apersonó ante el Ministerio de Educación para estar a
derecho, ante la eventualidad de que los demandados no cumplirían con remitir su recurso
jerárquico.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerados sus derechos al debido proceso, la “seguridad jurídica”, al trabajo
y estabilidad laboral, a la seguridad social y a la vida, citando al efecto los arts. 46.I, 49.III y 115.II
de la Constitución Política del Estado (CPE).
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1104
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicita se le conceda tutela y se disponga su restitución inmediata al cargo de Director del nivel
secundario de la Unidad Educativa “Buenas Nuevas” y el pago de sus haberes devengados,
restitución de su nombre en las planillas de pago de haberes del Ministerio de Educación, los
aportes a la seguridad social a largo y corto plazo, el bono de antigüedad que indebida e
ilegalmente le fueron suprimidos, así como se mantenga firme la decisión asumida por el Ministro
de Educación en la resolución del recurso jerárquico de 5 de julio de 2011 y nula la RA 035/2011,
que supuestamente resolvió su recurso jerárquico, por ser atentatoria al debido proceso y a la
seguridad jurídica.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Resulta imprescindible indicar con carácter previo que el acta de la audiencia pública del Tribunal
de garantías, fue redactada o copiada de manera ininteligible y desordenada, dificultando su lectura
y por ende el análisis esgrimido en ella.
Celebrada la audiencia pública el 2 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 92 a
100 de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado del accionante ratificó y amplió la acción de amparo constitucional presentada en los
siguientes términos: a) La primera irregularidad del proceso administrativo seguido en contra del
accionante fue desconocer lo dispuesto por el art. 28 del Decreto Supremo (DS) 26398, que señala
que el retiro de los profesores que ejercen cargos administrativos, como es un Director de Unidad
Educativa sólo será posible cuando alguno de los órganos de participación popular en educación lo
pida, es decir, no prevé la posibilidad de una sola denuncia como ocurrió en su caso y si bien hubo
una segunda denuncia, ésta nunca le fue notificada; b) La resolución administrativa sancionadora
en su contra carece de fundamentación jurídica; c) El Director Distrital de Educación III de la
Capital en lugar de remitir el recurso jerárquico ante el Ministerio de Educación, conforme lo
establece el art. 66.III de la LPA, dictó el mismo usurpando funciones de dicha entidad,
inobservando el principio administrativo de avocación consagrado en el art. 9 de la LPA, que para
operar tiene que ser a través de resolución expresa y motivada; y, d) Se ha lesionado el derecho a la
salud de su representado porque al haberlo cesado injustamente de su cargo ya no tiene seguro
social de corto plazo y requiere del mismo porque tiene la enfermedad de chagas.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

En el informe oral presentado en audiencia cursante de fs. 95 a 97, por los abogados de la parte
demandada, quienes manifestaron lo siguiente: 1) La norma aplicable al accionante, al ser un
director de unidad educativa, que pertenece a la carrera administrativa es el DS 212414, norma que
se le aplicó por soslayar la obligación de impedir cobros indebidos en la Unidad Educativa donde
trabajaba, además de haber permitido que los alumnos golpeen a una profesora colega de edad
avanzada que lo denunció; y, 2) El Tribunal administrativo que procesó y sancionó al accionante
está compuesto por tres personas, Presidente, Secretario y Actuario, quienes firmaron el Auto
Inicial y Auto Final del proceso administrativo seguido en su contra, los cuales no se encuentran en
la audiencia. Por cuyos motivos, solicitaron que la acción interpuesta sea declarada improcedente.

I.2.3. Resolución

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1105


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Los Vocales de la Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, por
Resolución 06/2012 de 2 de febrero, cursante de fs. 97 a 100, concedió la tutela solicitada y
dispuso la inmediata restitución del accionante al cargo que venía desempeñando anteriormente
y, en consecuencia, anuló las Resoluciones de los recursos de revocatoria y jerárquico, a efecto de
que se reencause el procedimiento en base a la Ley de Procedimiento Administrativo, respetando la
competencia para resolver ambos recursos, aclarando que una vez ejecutoriadas las Resoluciones
que se dicten, recién se podrán ejecutar y disponer los fallos de carácter sancionatorios que son
consecuencias de este procedimiento.

La Resolución, se sustenta en base a lo siguiente: i) Respecto a la falta de legitimación pasiva


porque no fueron demandados todos los miembros del Tribunal sumariante, corresponde señalar
que los motivos de esta acción son respecto de las autoridades ahora demandadas y no así respecto
de aquéllos, por cuanto no está siendo observado el procedimiento del sumario administrativo; y,
ii) La norma aplicable al caso particular es la Ley de Procedimiento Administrativo y no así el
procedimiento establecido en el DS 23968 de 24 de febrero de 1995, que fue derogado mediante su
Disposición Final Primera, que permitía elevar en calidad de remisión el recurso jerárquico al
director departamental. Es decir, la revocatoria la resuelve el Tribunal sumariante y el recurso
jerárquico debió resolverlo la Dirección Distrital, lo que no sucedió. Tampoco existió una
resolución de avocación, y además la delegación para la resolución de recurso jerárquico no está
permitida en virtud de lo dispuesto por el art. 7 de la LPA. Por lo que, el procedimiento utilizado
para resolver estos recursos y la competencia no han sido respetados y, consiguientemente, todo lo
ejecutado es totalmente ilegal e inconstitucional al haberse suspendido de su cargo y bajado a otro
nivel inferior desconociendo el art. 74 de la mencionada Ley, referido a la presunción de inocencia
siendo esta la razón de otorgar la tutela, es decir, primero debe resolverse y concluirse en un
procedimiento administrativo idóneo, y una vez ejecutoriado este procedimiento en las
resoluciones que se dicten recién se puede ejecutar la resolución, aquí se procedió de diferente
manera.

La parte demandada, solicitó aclaración y enmienda en la audiencia señalando que el hecho de anular
solamente la resoluciones de revocatoria y jerárquico determina que el Tribunal de garantías está dando
por bien hecho la resolución administrativa sancionadora dictada en contra del accionante y que no está
claro si se anula o no. A cuya solicitud, en vía de aclaración el Tribunal de garantías señaló que: a) No se
anuló el procedimiento administrativo sino las Resoluciones de revocatoria y jerárquica; y, b) No se
puede ejecutar la Resolución sancionatoria por el principio de presunción de inocencia (art. 74 de la
LPA), porque no se encuentra ejecutoriada, lo cual implica la forzosa e imperiosa restitución del
accionante al cargo que anteriormente ejercía con todos los salarios y derechos inherentes que le
correspondía a sus funciones. Es decir, esa Resolución recién podrá ser ejecutada después de ser
resueltos los recursos de revocatoria y jerárquico, cuando adquieran la calidad de cosa juzgada.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Al no haber encontrado consenso en sala, de conformidad al art. 30.I.6 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional (LTCP), se procedió a convocar al Presidente del Tribunal
Constitucional Plurinacional de Bolivia a fin de dirimir con su voto el caso en análisis.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan


seguidamente:
II.1. Por memorando de designación 000999, Francisco Vedia Aldana fue institucionalizado como
Director de nivel secundario de la Unidad Educativa “Buenas Nuevas” de la ciudad de Santa Cruz.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1106
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. Dentro del proceso disciplinario administrativo seguido a denuncia de Fanny Hurtado Paz,
Directora del nivel primario, turno mañana de la Unidad Educativa Fiscal Evangélica “Buenas
Nuevas” contra Francisco Vedia Aldana, Director del nivel secundario, turno mañana de la misma
Unidad Educativa -ahora accionante-, mediante RA 003/18-03-2011, el Tribunal Disciplinario
Administrativo III de la Dirección Distrital de Educación III de Santa Cruz, pronunció Auto Inicial
del proceso disciplinario por faltas graves y muy graves contenidas en la RS 212414 en los
siguientes artículos: 10 inc. d) exacción a los padres de familia, 10 inc. o) venta de uniforme y
distintivos dentro la Unidad Educativa, 11 inc. b) no rendición de cuentas recaudadas por concepto
de la pesca milagrosa, dineros recaudados por rifas, quermeses y otras actividades, 10 inc. p)
maltrato físico y psicológico a los alumnos establecido en el Reglamento Interno, 10.II compra de
libros sin darle uso y la no aplicación del Plan de Estudio del Ministerio de Educación, y 11 inc. a)
reincidencia voluntaria de resistencia a disposiciones superiores (fs. 41 a 43).

II.3. Después de la presentación de pruebas de cargo y descargo, el Tribunal Disciplinario


Administrativo III de la Dirección Distrital de Educación III de Santa Cruz, por RA 007/21-04-
2011, dictó el Auto Final de proceso disciplinario administrativo, resolvió aplicar la sanción de
descenso a un cargo inferior establecido en el art. 13 (tipificación de sanciones) inc. b)
(sanciones por faltas graves) “3era parte” al profesor Francisco Vedia Aldana en calidad de
Director del nivel secundario de la Unidad Educativa fiscal “Buenas Nuevas” del turno de la
mañana. Sanción que se aplicaría desde el momento de su notificación con el presente Auto,
debiendo el Director Distrital de Educación III, designar al ahora accionante en otra Unidad
Educativa donde exista acefalía en calidad de profesor de acuerdo a su especialidad (fs. 48 a 53).

II.4. Contra dicha Resolución, el accionante interpuso recurso de revocatoria el 28 de abril de


2011, que fue resuelto por el Director Departamental de Educación de Santa Cruz, Bartolomé
Puma Velásquez, mediante RA 024/2011, de 7 de mayo (fs. 54 a 55), ratificando el fallo emitido
por el Tribunal Disciplinario Administrativo de la Dirección Distrital de Educación III de Santa
Cruz. (fs. 6 a 7)

II.5. Por memorial de 5 de julio de 2011, el accionante interpuso ante la Dirección Departamental
de Educación Santa Cruz, recurso jerárquico (fs. 8 a 14) que fue resuelto por RA 035/2011, de 18
de julio, por Bartolomé Puma Velásquez, Director Departamental de Educación, rechazando
el recurso jerárquico en aplicación a lo establecido en el art. 31 del DS 23968 de 24 de febrero de
1995 (fs. 61 a 62)

II.6. Por nota de 7 de diciembre de 2011, dirigida al Director Distrital de Educación III de Santa
Cruz, el accionante y otras solicitaron su reincorporación a los cargos de Dirección en la Unidad
Educativa “Buenas Nuevas” en cumplimiento del fallo del recurso jerárquico presentado ante el
Ministerio de Educación y culturas, señalando que mereció una respuesta favorable a su petición,
por haberse operado el silencio administrativo positivo según lo dispuesto en el art. 67.II de la LPA
y por ende proceda a su reincorporación como Director de la Unidad Educativa (fs. 59 y 60), que
fue resuelta por proveído de 12 del mismo mes y año, por el Director Distrital de Educación III de
Santa Cruz, en sentido de que dicha solicitud era impertinente e improcedente “…toda vez que el
recurso planteado ha sido reiterado y que a la fecha el mismo se encuentra ejecutoriado y al no
existir recurso ulterior, se mantiene firme sustentado al fallo donde se impone la sanción la
remoción al cargo de docentes” (fs. 58).

II.7. Por memorial presentado el 4 de agosto de 2011 ante el Ministerio de Educación, el


accionante señalando que no tiene respuesta a su recurso jerárquico, solicitó para que por la
sección correspondiente corra en traslado a su domicilio procesal que es la ciudad de La Paz, el
último recurso con más su expediente completo de proceso disciplinario administrativo instaurado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1107
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

en su contra ya que hace veintiún días que se encuentra en el Tribunal Departamental de Educación
de Santa Cruz (fs. 63 a 64)

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos al debido proceso, la seguridad jurídica, al


trabajo y estabilidad laboral, seguridad social y a la vida, toda vez que dentro del proceso
disciplinario seguido en su contra en condición de Director del nivel secundario de la Unidad
Educativa “Buenas Nuevas” de la ciudad de Santa Cruz, el Tribunal Disciplinario Administrativo
de la Dirección Distrital de Educación III del departamento de Santa Cruz, le sancionó con el
descenso a un cargo inferior, contra cuya resolución recurrió de revocatoria y jerárquico, último
recurso que concluyó con el silencio administrativo positivo por parte del Ministerio de Educación,
por haber pasado noventa días hábiles sin que dicha autoridad hubiera pronunciado resolución,
quedando ejecutoriado y con calidad de cosa juzgada; señalando como actos lesivos, los siguientes:
1) La Resolución administrativa sancionadora, que le sancionó con el descenso a un cargo inferior
carece de fundamentación jurídica; 2) El Director Departamental de Educación, usurpando
competencias del Ministerio de Educación, emitió tanto la Resolución de revocatoria como la jerárquica;
y, 3) Al haberse operado el silencio administrativo positivo, el Director Distrital de Educación -
codemandado- debió cumplir y ejecutar lo tácitamente determinado por el Ministerio de Educación, lo
que no ocurrió conforme se advierte del tenor del proveído de 12 de diciembre de 2011. En
consecuencia corresponde determinar en revisión, si se concede o no la tutela solicitada.

III.1. El ejercicio de la potestad sancionadora disciplinaria del Estado debe respetar, entre otras la
garantía del debido proceso. Su sustento, el modelo de Estado Constitucional de Derecho
Plurinacional Comunitario e intercultural

Conforme se desarrolló en la SCP 0112/2012 de 27 de abril de 2012, existen consecuencias del


nuevo modelo de Estado Constitucional de Derecho, Plurinacional Comunitario e Intercultural
asumido en la Constitución de 2009 en el razonamiento jurídico de los jueces a la hora de cumplir
su labor decisoria cotidiana. Entendimiento que se hace extensivo también, de manera general,
en el razonamiento jurídico de las servidoras y servidores públicos del Estado, del nivel
central y de las entidades territoriales autónomas, cuando ejerzan potestades
administrativas, entre ellas, la potestad sancionadora de la administración pública.

Una de las consecuencias, es que el razonamiento jurídico de las servidoras y servidores públicos del
Estado, del nivel central y de las entidades territoriales autónomas, debe partir de la Constitución Política
del Estado, de sus normas constitucionales-principios atendiendo las características del nuevo modelo de
Estado que los sustentan.

La referida Sentencia Constitucional Plurinacional, refiere que: “Las normas constitucionales-


principios en la Constitución boliviana, son la pluralidad de valores, principios, derechos
fundamentales no sólo individuales (liberales y sociales) sino un amplio catálogo de derechos y
garantías, principios y valores plurales y colectivos que la constitución representa como un
pacto de postulados distintos y hasta veces contradictorios, pero que al final deben coexistir. En
esta situación se requiere más ponderación que subsunción, que transforme las promesas
constitucionales en realidades constitucionales”.

Más adelante dicha Sentencia Constitucional Plurinacional precisó que las normas constitucionales
principios: “…no son otra cosa que los valores, principios, derechos fundamentales y garantías
constitucionales, es decir, la 'moral objetivada-positivada, 'meta-normas' que informan, orientan al
poder público y a la convivencia social, las relaciones entre el ciudadano y el Estado y entre
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1108
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

particulares, que si bien se agotan en su positivización constitucional, empero encuentran una


construcción judicial constante, siempre y cuando se salvaguarde la unidad del ordenamiento, es decir,
su coherencia” (las negrillas y subrayado nos corresponden).

El mismo fallo, respecto al valor normativo, jerarquía y obligatoriedad de las normas


constitucionales principios, puntualizó que “…las normas constitucionales-principios, establecidos
en el texto constitucional tienen validez normativa, prelación jerárquica y son obligatorias
respecto a las normas constitucionales-reglas y con mayor con relación respecto a las normas
legales-reglas (contenidas en las leyes en sentido general sustantivas o procesales) por el sólo
hecho de estar inscritas en la Constitución, una Constitución ideada dentro del modelo de Estado
Constitucional, con todo lo que ello implica”.

De esa concepción, respecto al ejercicio de la potestad sancionadora disciplinaria del Estado, se


desprenden dos temas, que se sustentan en normas constitucionales-principios del nuevo modelo de
Estado: 1) El fundamento de su ejercicio y, 2) Los límites a ese ejercicio, que encuentran una barra
de contención en el respeto de garantías mínimas, siendo una de ellas, el debido proceso.

1) El ejercicio de la potestad sancionadora del Estado, en el ámbito disciplinario, permite a la


administración pública en sus distintos órganos e instituciones del nivel central y de las diferentes
entidades territoriales autónomas imponer sanciones a sus servidoras y servidores públicos para
garantizar que se cumplan los fines y funciones esenciales del Estado previstos en la Constitución
y la ley conforme refiere el art. 9 de la CPE, siendo ese su fundamento. En efecto, son la
Constitución, la legislación y reglamentación del nivel central y de las entidades territoriales
autónomas que en ese cometido le confieren a la Administración Pública la potestad y facultad de
aplicar, en vía disciplinaria, diversos tipos de sanciones a sus servidoras y servidores públicos.

2) Ahora bien, el ejercicio de la potestad de las entidades públicas de imponer sanciones


disciplinarias a sus propios servidores públicos, está subordinado y limitado al respeto de
determinadas garantías mínimas, entre ellas, la garantía del debido proceso, por cuanto ello
controla y limita el campo de acción de la potestad sancionadora del Estado, a efectos de evitar una
actividad arbitraria de la administración pública que se torne en ilícita. Ello, en aras de la
búsqueda de la materialización de los valores, en los que se sustenta el Estado Constitucional
de Derecho Plurinacional Comunitario e Intercultural (art. 8.II de la CPE), que en lo
conducente, al ámbito sancionador disciplinario, principalmente son el de justicia y armonía.

III.1.1. El debido proceso en el ejercicio de la actividad sancionadora del Estado

a) El debido proceso, está reconocido como derecho fundamental, garantía jurisdiccional y derecho
humano en las normas contenidas en los arts. 115.II y 117.I de la CPE, art. 8 de la Convención
Americana de Derechos Humanos (CADH) y art. 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos (PIDCP).

El art. 115.II de la CPE, reconoce que: “El Estado garantiza el derecho al proceso, a la defensa y a
una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones”.

A su vez, el art. 117.I de la CPE, consagra:”Ninguna persona puede ser condenada sin haber sido
oída y juzgada previamente en un debido proceso. Nadie sufrirá sanción penal que no haya sido
impuesta por autoridad judicial competente en sentencia ejecutoriada”.

Por su parte el art. 8 de la CADH, señala:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1109


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable,
por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la
ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella, o para la determinación
de sus derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.

2. Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se
establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda persona tiene derecho, en plena
igualdad, a las siguientes garantías mínimas:

a) Derecho del inculpado de ser asistido gratuitamente por el traductor o intérprete, si no


comprende o no habla el idioma del juzgado o tribunal;

b) Comunicación previa y detallada al inculpado de la acusación formulada;


c) Concesión al inculpado del tiempo y de los medios adecuados para la preparación de su defensa;
d) Derecho del inculpado de defenderse personalmente o de ser asistido por un defensor de su
elección y de comunicarse libre y privadamente con su defensor;
e) Derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el Estado, remunerado
o no según la legislación interna, si el inculpado no se defendiere por sí mismo ni nombrare
defensor dentro del plazo establecido por la ley;
f) Derecho de la defensa de interrogar a los testigos presentes en el tribunal y de obtener la
comparecencia, como testigos o peritos, de otras personas que puedan arrojar luz sobre los hechos;
g) Derecho a no ser obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse culpable, y
h) Derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior.

3. La confesión del inculpado solamente es válida si es hecha sin coacción de ninguna naturaleza.

4. El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo juicio por los
mismos hechos.

5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar los intereses de la
justicia”(las negrillas son agregadas)

b) La jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), -que forma


parte del bloque de constitucionalidad según la SC 0110/2010-R, de 10 de mayo-,
interpretando el art. 8 de la Convención Americana sobre derechos Humanos (CADH) ha
entendido que el respeto y protección del debido proceso es también aplicable en el ámbito de
la potestad sancionadora de la administración pública.

Así en el caso Baena Ricardo y otros Vs. Panamá (Sentencia de 2 de febrero de 2001, Fondo,
Reparaciones y Costas) entendió que: “… cualquier actuación u omisión de los órganos estatales
dentro de un proceso, sea administrativo sancionatorio o jurisdiccional, debe respetar el debido
proceso legal”, derecho que “… es un derecho humano el obtener todas las garantías que
permitan alcanzar decisiones justas, no estando la administración excluida de cumplir con este
deber. Las garantías mínimas deben respetarse en el procedimiento administrativo y en cualquier
otro procedimiento cuya decisión pueda afectar los derechos de las personas” (párrafos 124 y
127).

El mismo órgano interamericano de protección derechos humanos, en el caso del Tribunal


Constitucional Vs. Perú (Sentencia de 31 de enero de 2001, Fondo, Reparaciones y Costas) a partir de la
interpretación del art. 8 de la CADH, señaló:

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1110


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

“El respeto a los derechos humanos constituye un límite a la actividad estatal, lo cual vale para
todo órgano o funcionario que se encuentre en una situación de poder, en razón de su carácter
oficial, respecto de las demás personas. Es, así, ilícita, toda forma de ejercicio del poder público
que viole los derechos reconocidos por la Convención. Esto es aún más importante cuando el
Estado ejerce su poder sancionatorio, pues éste no sólo presupone la actuación de las autoridades
con un total apego al orden jurídico, sino implica además la concesión de las garantías mínimas
del debido proceso a todas las personas que se encuentran sujetas a su jurisdicción, bajo las
exigencias establecidas en la Convención” (párrafo 68).

“Si bien el artículo 8 de la Convención Americana se titula “Garantías Judiciales”, su aplicación no se


limita a los recursos judiciales en sentido estricto, “sino el conjunto de requisitos que deben observarse
en las instancias procesales” a efecto de que las personas puedan defenderse adecuadamente ante
cualquier tipo de acto emanado del Estado que pueda afectar sus derechos” (párrafo 69).

“Ya la Corte ha dejado establecido que a pesar de que el citado no especifica garantías mínimas en
materias que conciernen a la determinación de los derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal
o de cualquier otro carácter, el elenco de garantías mínimas establecido en el numeral 2 del mismo
precepto se aplica también a esos órdenes y, por ende, en ese tipo de materias el individuo tiene también
el derecho, en general, al debido proceso que se aplica en materia penal” (párrafo 70).

“De conformidad con la separación de los poderes públicos que existe en el Estado de Derecho, si
bien la función jurisdiccional compete eminentemente al Poder Judicial, otros órganos o
autoridades públicas pueden ejercer funciones del mismo tipo. Es decir, que cuando la
Convención se refiere al derecho de toda persona a ser oída por un “juez o tribunal competente”
para la “determinación de sus derechos”, esta expresión se refiere a cualquier autoridad pública,
sea administrativa, legislativa o judicial, que a través de sus resoluciones determine derechos y
obligaciones de las personas. Por la razón mencionada, esta Corte considera que cualquier
órgano del Estado que ejerza funciones de carácter materialmente jurisdiccional, tiene la
obligación de adoptar resoluciones apegadas a las garantías del debido proceso legal en los
términos del artículo 8 de la Convención Americana”. (párrafo 71)

c) La jurisprudencia constitucional, del mismo modo, interpretando el contenido del debido


proceso, entendió que este se aplica a toda actividad sancionadora del Estado sea en el ámbito
jurisdiccional o administrativo

En ese sentido la SC 0042/2004 de 22 de abril, pronunciada por el Tribunal Constitucional anterior


señaló que:

“…toda actividad sancionadora del Estado, sea en el ámbito jurisdiccional o administrativo, debe ser
impuesta previo proceso, en el que se respeten todos los derechos inherentes a la garantía del debido
proceso, entre los cuales se encuentra el derecho a la defensa, que implica a su vez, entre otros
elementos, la notificación legal con el hecho que se le imputa al afectado, y con todas las actuaciones y
resoluciones posteriores, la contradicción y presentación de pruebas tendentes a desvirtuar la
acusación, la asistencia de un defensor, el derecho pro actione ó a la impugnación; asimismo, el
derecho a la defensa, se relaciona directamente con los derechos a la igualdad de las partes ante la ley
y ante su juzgador, al juez natural y a la seguridad” (las negrillas son añadidas).

Y respecto al debido proceso disciplinario en la SC 0022/2006 de 18 de abril, el mismo órgano


jurisdiccional señaló: “(…) el derecho administrativo disciplinario, por afectar la esfera de
autodeterminación de las personas mediante la imposición de sanciones personales, alberga los
principios del Derecho Penal en cuanto al debido proceso…”.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1111
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El Tribunal Constitucional aplicó este entendimiento a infinidad de casos que fueron resueltos en
su jurisdicción entendiendo que todos los principios y garantías propias del derecho penal se
aplican también extensivamente en el ámbito administrativo sancionador.

III.1.2. El recurso de revocatoria y el recurso jerárquico como medios de impugnación en la


vía administrativa disciplinaria sancionadora (formas procesales) tienen la finalidad de
asegurar la eficacia material del derecho a la doble instancia o de recurrir ante un tribunal
superior y el derecho a la defensa en la fase impugnativa

Desde la concepción del Estado Constitucional de Derecho, la tramitación de los procesos


judiciales o administrativos no debe constituirse en simples enunciados formales (justicia
formal, como mera constatación de cumplimiento de las formas procesales), sino debe asegurar
la plena eficacia material de los derechos fundamentales procesales y sustantivos (justicia
material, debido proceso y sus derechos fundamentales constitutivos y sustantivos).

Al respecto, como ejemplo, corresponde recordar la jurisprudencia del Tribunal Constitucional


anterior, cuando en la línea jurisprudencial construida a partir de la SC 1845/2004-R, de 30 de
noviembre, entendió que la forma procesal de las notificaciones -en sentido genérico- en los
procesos judiciales o administrativos, no está dirigida a cumplir una formalidad en sí misma, sino
que su valor está condicionado en la medida que asegure la eficacia material del derecho a la
defensa. Por ello, dicha Sentencia concluyó que cuando la notificación por defectuosa que sea en
su forma (por ejemplo no se cumplan las formas procesales para la notificación personal, cedularia,
edictal, etc.), pero cumplan con su finalidad (hacer conocer la comunicación en cuestión) y, por
ende, aseguren la eficacia material del derecho a la defensa, esa notificación es válida.

De ahí que es posible concluir que el reconocimiento de los típicos medios de impugnación de los
actos administrativos, reconocidos en el orden legal (Ley de Procedimiento Administrativo), a
través de dos instancias: el recurso de revocatoria y el recurso jerárquico, son formas procesales
de impugnación en sede administrativa, instituidas por el legislador, con base en las cuales
debe procederse en la vía de impugnación, es decir, es el procedimiento del ordenamiento
interno del Estado que prevé dos instancias, las que no están dirigidas a cumplir una
formalidad procesal en sí misma, sino que tienen valor en la medida que aseguren la eficacia
material de los siguientes derechos fundamentales y garantías constitucionales: i) Derecho a la
doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior en el ámbito disciplinario sancionador y, su
nexo con ii) El derecho a la defensa en la fase impugnativa.

Es decir, en el caso, las formas del procedimiento administrativo sancionador en sus diferentes
fases, guardarán correspondencia y coherencia con el derecho al debido proceso en la medida en
que se aseguren su eficacia.

Dado el carácter sancionador del proceso disciplinario, este -en todas sus fases o instancias- tiene
que sustanciarse y resolverse garantizando el debido proceso, que tiene como componente esencial
el derecho a la defensa. En efecto si se analiza la fase de impugnación del proceso disciplinario en
sede administrativa, es posible concluir que sólo puede predicarse la eficacia material del derecho
a la defensa (art. 115.II de la CPE y 8.2 inc. f) de la CADH) cuando se otorga a las servidoras y
servidores públicos la oportunidad de ejercer un otro derecho fundamental, este es: el derecho a la
doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior art. 8.2 inc. h) de la CADH y 14.5 del
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP)

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1112


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El art. 8.2 inc. h) de la CADH, señala: “Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se
presuma su inocencia mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso,
toda persona tiene derecho, en plena igualdad, a las siguientes garantías mínimas: h) derecho
de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior”.

Por su parte, el art. 14.5 del PIDCP, estipula: “Toda persona declarada culpable de un delito
tendrá derecho a que el fallo condenatorio y la pena que se le haya impuesto sean sometidos a
un tribunal superior, conforme a lo prescrito por la ley”.

La Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Herrera Ulloa Vs. Costa Rica
(Sentencia de 2 de julio de 2004, Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas)
precisando el alcance del “derecho a recurrir el fallo ante juez o tribunal superior”, estableció, en
lo que en el caso interesa, las siguientes afirmaciones, cuyo subrayado es añadido:

1. El derecho de recurrir el fallo es una garantía primordial que se debe respetar en el marco del
debido proceso legal, en aras de permitir que una sentencia adversa pueda ser revisada por un
juez o tribunal distinto y de superior jerarquía orgánica (párrafo 158) (las negrillas y el
subrayado nos pertenecen)

2. El derecho de recurrir “… busca proteger el derecho de defensa otorgando durante el proceso


la posibilidad de interponer un recurso para evitar que quede firme una decisión que fue
adoptada con vicios y que contiene errores que ocasionarán un perjuicio indebido a los intereses
de una persona”. (párrafo 158)

3. Independientemente de la denominación que se le de al recurso existente para recurrir un


fallo, lo importante es que dicho recurso garantice un examen integral de la decisión recurrida
(párrafo 165)

En el caso de un proceso administrativo disciplinario sancionador, el derecho a la doble instancia


o de recurrir ante una instancia superior, permite que esta ultima, conozca y revise la resolución
pronunciada por el tribunal de primera grado. Instancia superior que debe ser diferente a la que
emitió la decisión administrativa sancionadora en primera instancia, a efectos de que, la servidora o
el servidor público, impugnando o controvirtiendo una decisión sancionatoria, obtengan la revisión
de la decisión ante la instancia superior.

III.2. El caso de examen

De la acción de amparo constitucional interpuesta por el accionante en su condición de Director del nivel
secundario de la Unidad Educativa “Buenas Nuevas” de la ciudad de Santa Cruz, se tienen los siguientes
actos denunciados como lesivos que -a juicio del accionante- vulneraron sus derechos al debido proceso,
a la seguridad jurídica, al trabajo y estabilidad laboral, a la seguridad social y a la vida: 1) Refiere que el
Director Departamental de Educación, usurpando competencias del Ministerio de Educación, emitió
tanto la Resolución de revocatoria como la jerárquica; 2) Señala que al haberse operado el silencio
administrativo positivo, el Director Distrital de Educación III de la ciudad de Santa Cruz codemandado
debió cumplir y ejecutar lo tácitamente determinado por el Ministerio de Educación, lo que no ocurrió
conforme se advierte del proveído de 12 de diciembre de 2011; 3) Alega que la Resolución
administrativa sancionadora en su contra que le sancionó con el descenso a un cargo inferior carece de
fundamentación jurídica.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1113


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2.1. Sobre el pronunciamiento del recurso jerárquico por la misma autoridad


administrativa pública que resolvió el recurso de revocatoria y la vulneración al debido
proceso

De los antecedentes del caso se evidencia que dentro del proceso disciplinario seguido en contra
del accionante en su condición de Director del nivel secundario de la Unidad Educativa Buenas
Nuevas de la ciudad de Santa Cruz, Bartolomé Puma Velásquez, Director Departamental de
Educación de Santa Cruz -codemando- pronunció tanto la Resolución de revocatoria
024/2011 de 7 de mayo (Conclusión II.4) como la Resolución jerárquica 035/2011 de 18 de
julio (Conclusión II.5).

De este hecho, por demás lesivo a derechos fundamentales y garantías constitucionales como se
precisará más adelante, se desprende varios razonamientos:
i) Que en el proceso disciplinario sustanciado contra el ahora accionante, se suprimió la
posibilidad de que la Resolución administrativa sancionatoria 007/21-04-2011, que resolvió
aplicarle la sanción de descenso a un cargo inferior y designarlo a otra Unidad Educativa en
calidad de profesor pueda ser revisada por un tribunal distinto y de superior jerarquía
orgánica (CIDH, caso Herrera Ulloa Vs. Costa Rica, Sentencia de 2 de julio de 2004,
Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas).

ii) Que el accionante, en los hechos, fue procesado y sancionado disciplinariamente en única
instancia, precisamente por la supresión de la posibilidad de impugnar la decisión sancionatoria
cuestionada de adversa por un tribunal distinto y de superior jerarquía orgánica.

Ello ocasionó que el proceso disciplinario sancionador contra el accionante, que goza de garantías
mínimas, una de ellas, el debido proceso, se convierta en un proceso de única instancia de facto,
cuando el legislador ha reconocido la doble instancia instituyendo precisamente el recurso de
revocatoria y el recurso jerárquico, conforme a los cuales deben procederse en la vía de
impugnación administrativa. Recursos administrativos que como se analizó anteriormente no están
dirigidas a cumplir una formalidad procesal en sí misma, sino que tienen valor en la medida
que aseguren la eficacia material de los derechos a la doble instancia o de recurrir ante un
tribunal superior en el ámbito disciplinario sancionador y el derecho a la defensa en la fase
impugnativa.

Es decir, como efecto de la supresión del recurso jerárquico, también fueron suprimidos los
derechos fundamentales referidos, los que reconocen a quienes han intervenido en un proceso
disciplinario sancionador la posibilidad de controvertir, impugnar o cuestionar la Resolución
sancionatoria de primera instancia ante una autoridad administrativa superior y diferente a la que
emitió la sanción, para que ésta revise y corrija los defectos, vicios o errores jurídicos en los que
hubiera podido incurrir la autoridad de primera instancia. Situación que la presente acción de
amparo constitucional, debe corregir, dado que su ámbito de protección de acuerdo a la norma
contenida en el art. 128 de la CPE, “…tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos
de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley”.
De otro lado, ese acto ilegal, ocasionó que el ejercicio de la potestad sancionadora disciplinaria de
la Administración Pública reconocido por el orden constitucional se convierta en arbitrario e ilícito,
al no haber encontrado límites en el respeto de garantías mínimas, entre ellas, la garantía al debido
proceso, el que en su dimensión de principio es el que debe guiar el ejercicio de la potestad
sancionadora disciplinaria de la administración del Estado.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1114


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En cuyo mérito, la ratio decidendi (razón de la decisión) de la concesión de la presente acción de


amparo constitucional, se encuentra en este apartado (Fundamento Jurídico III.2.1)

III.2.2. Respecto a los otros actos denunciados como lesivos

El accionante también indica otros actos denunciados como lesivos, los siguientes: 1) Que al
haberse operado el silencio administrativo positivo, el Director Distrital de Educación III de la
ciudad de Santa Cruz -codemandado- debió cumplir y ejecutar lo tácitamente determinado por el
Ministerio de Educación, lo que no ocurrió conforme se advierte del tenor del proveído de 12 de
diciembre de 2011; y, 2) Alega que la Resolución Administrativa sancionadora en su contra que le
sancionó con el descenso a un cargo inferior carece de fundamentación jurídica.

Al respecto, corresponde señalar que considerando que la ratio decidendi (razón de la decisión) de la
concesión de la presente acción de amparo constitucional, se encuentra en este apartado (Fundamento
Jurídico III.2.1, cuyo sustento está desarrollado en el Fundamento Jurídico III.1) y que los efectos de la
tutela conllevará la nulidad de la resolución jerárquica 035/2011, de 18 de julio, no existe relevancia
constitucional para analizar estos otros actos denunciados como lesivos, toda vez que: i) La denuncia de
falta de fundamentación jurídica de la resolución administrativa sancionadora, esto es el derecho de la
servidora o servidor público a que el pronunciamiento de una resolución sancionatoria sea mediante acto
motivado (principio de la motivación de los actos administrativos), podrá ser corregida en la instancia
jerárquica; y ii) la nulidad de la Resolución jerárquica, determina que no exista resolución alguna que
deba ser cumplida y ejecutada.

III.2.3. Respecto a la supuesta vulneración de los derechos al trabajo y estabilidad laboral,


seguridad social y la vida

Por otro lado, corresponde analizar si la vulneración del derecho al debido proceso (derecho a la
doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior y el derecho a la defensa) por los motivos
antes señalados, restringió a su vez, otros derechos fundamentales del ahora accionante, dado que
si bien el debido proceso y sus derechos constitutivos son derechos de protección autónoma,
empero, también tiene carácter instrumental, en tanto permiten el disfrute de otros derechos
sustantivos, es decir, el debido proceso es una garantía para el respeto de derechos sustantivos.

A la seguridad social a corto plazo y a la vida. La situación referida, no repercutió en el goce de su


ejercicio al derecho a la seguridad social a corto plazo (art. 45 de la CPE), por cuanto la Resolución
Administrativa 007/21-04-2011 sancionatoria resolvió aplicar la sanción de descenso a un cargo inferior
y designar al ahora accionante en otra Unidad Educativa donde exista acefalía en calidad de
profesor de acuerdo a su especialidad. Esto significa que no obstante la sanción disciplinaria, el
accionante seguía gozando de seguridad social a corto plazo. Por lo mismo, no fue demostrado por el
accionante, de qué manera se hubiera lesionado o puesto en peligro su derecho a la vida.

III.2.4. En cuanto a la falta de legitimación pasiva del Director Distrital de Educación

El Director Distrital de Educación de la ciudad de Santa Cruz, carece de legitimación pasiva para
ser demandado en la presente acción tutelar, debido a que no tuvo intervención alguna en el
pronunciamiento de las resoluciones del recurso de revocatoria o del recurso jerárquico, conforme
se desarrolló en la ratio decidendi (razón de la decisión) de la concesión de la presente acción de
amparo, que se encuentra en este apartado (Fundamento Jurídico III.2.1 y Fundamento Jurídico
III.1).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1115


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De todo lo expuesto, se concluye que el Tribunal de Garantías, al conceder la tutela, evaluó de


manera parcial el caso de autos.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera virtud de la autoridad que le confiere


la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional en revisión, resuelve:

1º APROBAR parcialmente la Resolución 06/2012 de 2 de febrero, de fs. 97 a 100 pronunciada


por la Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz; y, en
consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada en cuanto a la vulneración al debido proceso, al
derecho a la doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior, y el derecho a la defensa en la
fase impugnativa conforme el Fundamento Jurídico III.2.1, y no así respecto a los derechos a la
seguridad social a corto plazo y a la vida.

2º ANULAR la Resolución jerárquica 035/2011 de 18 de julio (Conclusión II.5) y, por ende,


disponer la inmediata corrección del procedimiento administrativo disciplinario, a efectos de que
se asegure el derecho a la doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior, y el derecho a la
defensa en la fase impugnativa.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Se hace constar que no interviene la magistrada de la Sala Tercera Dra. Ligia Mónica Velásquez
Castaños, por ser voto disidente.

Fdo. Dr. Ruddy José Flores Monterrey.-Presidente.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

VOTO DISIDENTE
Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Magistrada: Dra. Ligia Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00087-2012-01-AAC
Departamento: Santa Cruz
Partes: Francisco Vedia Aldana contra Daniel Quispe
Manchego, Director Distrital de Educación III y
Bartolomé Puma Velásquez, Director Departamental
de Educación ambos de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES

I.1. Objeto del voto disidente en la forma y puntos diferenciales

Del contenido de la petición de tutela, se establece lo siguiente: que el objeto de la tutela versa
sobre el resguardo de los derechos al debido proceso, a la seguridad jurídica, al trabajo y a la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1116
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

estabilidad laboral, a la seguridad social y a la vida, contenidos en los arts. 115.II, 49.III y 46.I de
la Constitución Política del Estado (CPE); asimismo, la causa de la tutela implica la denuncia de
tres actos lesivos esenciales: 1) La usurpación de competencias del Director Departamental de
Educación, así en el proyecto de manera textual se transcribe la denuncia de la parte accionante con
el siguiente tenor: “que el Director Departamental de Educación, usurpando competencias del
Ministerio de Educación, emitió tanto la Resolución de revocatoria como la jerárquica” (sic); 2) La
carencia de fundamentación de la resolución administrativa sancionadora emitida en contra de la
accionante; y, 3) El incumplimiento de los efectos del silencio administrativo positivo por parte del
Director Distrital de Educación, toda vez que al no haber respondido el Ministerio de Educación,
sería aplicable esta institución jurídica.

II. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

En base a estos antecedentes, se tiene que los puntos diferenciales en relación a la sentencia objeto
de disidencia, son los siguientes aspectos:

II.1. Considerando que una denuncia taxativa realizada por la parte accionante versa sobre el tema
de “usurpación de competencias”, es evidente que éste tópico se encuentra dentro del ámbito de
tutela del Recurso Directo de Nulidad de acuerdo a la SC 0099/2010-R de 10 de mayo, sin
embargo y sin modificar esta línea, en aplicación excepcional del principio pro-actione, para
situaciones en las cuales exista una manifiesta, grosera e irreparable vulneración a derechos
fundamentales, de manera excepcional y aplicando el método de la ponderación, con la
finalidad de asegurar la justicia material, flexibilizando para este efecto presupuestos
procesales, solamente con la finalidad de asegurar la materialización de los valores justicia e
igualdad, es factible tutelar el derecho a la competencia como elemento del debido proceso a
través de la acción de amparo constitucional.

II.2. En el caso de autos, definitivamente existe una manifiesta, grosera e irreparable vulneración al
derecho al debido proceso vinculado con una usurpación de competencias que además incide en la
garantía de la doble instancia, por esta razón, es menester conceder la tutela, pero para ello, con la
finalidad de brindar mayor seguridad al justiciable, antes de analizar la temática del debido
proceso, es importante fundamentar la razón jurídica por la cual esta problemática está siendo
analizada a través de la acción de amparo constitucional, argumentación que necesariamente debe
considerar dos aspectos esenciales la SC 0099/2010-R de 10 de mayo y el desarrollo dogmático del
principio pro-actione.

II.3. La sentencia objeto de referencia, si bien concede la tutela considerando como un elemento
esencial la garantía de la doble instancia; empero, a través de la acción de amparo constitucional,
de manera tácita, tutela la garantía de la competencia -pues este es un aspecto expresamente
denunciado-; este es precisamente el punto diferencial de argumentación, puesto que, considero
relevante la fundamentación que sustente los aspectos constitucionales que sustenten las razones
por las cuales en el caso concreto y sin que este hecho implique modulación o cambio de
entendimiento jurisprudencial, se conceda la tutela a través de la acción de amparo constitucional.

II.4. El análisis directo de la problemática, podría interpretarse como una modulación o cambio tácito
de jurisprudencia, máxime cuando la SC 0099/2010-R de 10 de mayo fue y es aplicada de manera
uniforme.

En base a estos razonamientos, si bien en relación a la sentencia cuestionada, existe concurrencia


de criterio en cuanto a la concesión de tutela, empero a continuación se desarrollará la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1117


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

argumentación jurídico-constitucional que sustenta la formulación de la presente disidencia en la


forma.

III.1. Los ámbitos de protección de la acción de amparo constitucional y el Recurso Directo


de Nulidad

Otro problema jurídico esencial a ser desarrollado en la presente sentencia, es el referente a la


diferenciación de ámbitos de protección de la Acción de Amparo Constitucional y del Recurso
Directo de Nulidad, aspecto que será abordado en este punto.

En el marco de lo señalado, debe iniciarse un análisis a partir del diseño del sistema reparador de
control plural de constitucionalidad adoptado por el Estado Plurinacional de Bolivia, el cual
tiene tres componentes esenciales: a) El control tutelar de constitucionalidad; b) El control
normativo de constitucionalidad; y, c) El control competencial de constitucionalidad. En ese
orden, el control tutelar de constitucionalidad, tiene la finalidad de resguardar todos los derechos
insertos en el Bloque de Constitucionalidad, por su parte, el control normativo de
constitucionalidad, está diseñado para precautelar el principio de Supremacía de la Constitución
a través de la verificación en cuanto a compatibilidad de contenido de toda norma de carácter
general con el Bloque de Constitucionalidad; finalmente, el control competencial de
constitucionalidad, tiene la finalidad de dirimir a la luz de la Constitución los conflictos de
competencia y además resguardar la garantía de la competencia. En base a las precisiones
desarrolladas, se tiene que la acción de amparo constitucional, específicamente disciplinada por
los arts. 128 y 129 de la CPE, es un mecanismo inserto dentro del brazo tutelar de
constitucionalidad, cuyo ámbito de protección es la tutela pronta y oportuna de derechos
fundamentales, siempre y cuando estos no tengan un mecanismo específico de defensa de
derechos.

Por su parte, el Recurso Directo de Nulidad, reconocido en el art. 202.12 de la CPE y 157 y
siguientes de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), dentro del sistema
reparador y plural de control de constitucionalidad, tiene una naturaleza jurídico-constitucional
mixta enmarcada tanto dentro del control tutelar como competencial de constitucionalidad. Este
razonamiento encuentra sustento en el objeto de protección de este mecanismo constitucional de
defensa, toda vez que siguiendo el entendimiento plasmado en la SC 0099/2010-R de 10 de mayo,
éste tiene la finalidad de tutelar un elemento específico del derecho al juez natural que es la
garantía de competencia, aspecto inmerso dentro del radio de control tutelar de constitucionalidad,
elemento que además se encuentra resguardado por el control competencial de constitucionalidad.

Ahora bien, de acuerdo a la ratio decidendi de la SC 0099/2010-R de 10 de mayo, el resguardo a


la competencia, como elemento del derecho al juez natural, debe ser tutelado a través del recurso
directo de nulidad, en ese contexto, del tenor literal del art. 157 en sus dos parágrafos de la
LTCP, debe precisarse los elementos que configuran su contenido esencial, los cuales se
resumen en los siguientes presupuestos: i) La usurpación de competencias por parte de
servidores públicos, a través de un acto o resolución; ii) Los actos de quien ejerza jurisdicción
que no emane de la ley; iii) Los actos de quien ejerza potestades que no emanen de la ley; iv)
Los actos o resoluciones dictadas por autoridad judicial que estuviere suspendida en sus
funciones; y, v) Los actos o resoluciones dictadas por autoridad judicial que estuviere cesante en
sus funciones.

De acuerdo a los presupuestos antes citados, debe establecerse que el Recurso Directo de
Nulidad, protege la garantía de la competencia contra actos o resoluciones concretos,
pronunciados en usurpación de competencias, ejercicio de jurisidicciones o potestades que no
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1118
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

emanen de la Ley ó emitidos por autoridad jurisdiccional en cesantía o suspendida. Por su parte,
la acción de amparo constitucional, es un mecanismo tutelar destinado a resguardar y en su caso
restituir derechos fundamentales no tutelados por otros mecanismos de defensa, por cuanto, al
estar la garantía de la competencia resguardada por el recurso directo de nulidad, este
presupuesto del derecho al debido proceso, no se encuentra tutelado por la acción de amparo
constitucional.

IV.1. La justicia material y su prevalencia en relación a la justicia formal para casos de


manifiestas vulneraciones a derechos fundamentales

La reforma constitucional aprobada mediante referendo constitucional de 25 de enero de 2009,


conlleva la vigencia de un modelo de Estado Constitucional de Derecho, así esta característica se
plasma en la cláusula estructural que rige la ingeniería propia del Estado Plurinacional de
Bolivia contemplada en el art. 1 de la CPE. En el marco de lo señalado, una de las características
esenciales del Estado Constitucional de Derecho, es la vigencia plena de los derechos
fundamentales, por tanto, el constituyente encomienda al contralor de constitucionalidad el
mandato expreso de velar por el respeto y la vigencia de los derechos y garantías
constitucionales, así lo establece el art. 196 de la CPE.

Por lo señalado, se establece que las bases y postulados del Estado Constitucional de Derecho,
constituyen el elemento legitimizador y directriz del ejercicio del control de constitucionalidad,
por esta razón, el último y máximo contralor de constitucionalidad como es el Tribunal
Constitucional Plurinacional, no puede consentir actos que impliquen una manifiesta y grosera
violación a derechos fundamentales, por ser estos contrarios al pilar estructural del Estado
Plurinacional de Bolivia.

En el marco de lo señalado y como consecuencia directa de los postulados propios del Estado
Constitucional de Derecho, el principio pro-actione se configura como una pauta esencial no
solo para la interpretación de derechos fundamentales, sino también como una directriz esencial
para el ejercicio del control de constitucional y la consolidación del mandato inserto en la
cláusula estructural del Estado plasmada en el art. 1 de la CPE; además, esta pauta, asegura el
cumplimiento eficaz de los valores justicia e igualdad material, postulados axiomáticos
directrices del nuevo modelo de Estado y reconocidos de manera expresa en el Preámbulo de la
Constitución y en el art. 8.1 también del texto constitucional.

En efecto, el principio pro-actione, asegura que a través de la metodología de la


ponderación, para casos concretos en los cuales exista una manifiesta, irreversible y
grosera vulneración a derechos fundamentales, el contralor de constitucionalidad, en
ejercicio del mandato inserto en el art. 196.1 de la CPE, debe hacer prevalecer la justicia
material a cuyo efecto, su labor hermenéutica de ponderación, generará la flexibilización a
ritualismos extremos para que en casos graves se repare un derecho manifiesta y
groseramente vulnerado, así, el rol del control de constitucionalidad, en virtud del cual, la
justicia formal ceda frente a la justicia material, consolida el fenómeno de constitucionalización
de un régimen constitucional axiomático, en el cual todos los actos de la vida social se
impregnan de contenido no solamente de normas supremas positivas, sino también de valores
supremos y rectores del orden jurídico imperante como ser la justicia e igualdad.

En el orden de ideas expuesto, toda vez que de acuerdo al art. 13.IV de la CPE, los derechos
fundamentales deben ser interpretados de acuerdo al bloque de convencionalidad imperante, es
decir en el marco del contenido de los tratados internacionales referentes a derechos humanos, es
evidente que en virtud a esta pauta, deben aplicarse las pautas de interpretación para derechos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1119
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

plasmadas en el art. 29 de la Convención Americana de Derechos Humanos, disposición que


forma parte del Bloque de Constitucionalidad del Estado Plurinacional de Bolivia y que en su
contenido esencial, reconoce la esencia jurídica del principio pro-homine, pauta a partir de la
cual, en el marco de favorabilidad y eficacia máxima de los derechos fundamentales, la teoría
constitucional ha desarrollado el principio pro-actione, el cual está destinado precisamente a
resguardar una vigencia real de los derechos fundamentales, siendo el encargado de este rol el
contralor de constitucionalidad, por ser éste en los estados miembros del Sistema Interamericano
de Protección de Derechos Humanos, el último y máximo garante de los derechos
fundamentales.

La postura antes señalada, ha sido adoptada también por el otrora Tribunal Constitucional, el
cual, en el ejercicio de su rol de control de constitucionalidad, en casos concretos aplicó el
principio pro-actione, haciendo prevalecer con su decisión la justicia material por sobre la
justicia formal en caso de graves lesiones a derechos fundamentales, así, este razonamiento ha
sido expresamente desarrollado por las SSCC 1044/2003-R1138/2004-R, 1294/2006-R, entre
muchas otras. Estos entendimientos, de acuerdo a la argumentación jurídica desarrollada
precedentemente y al ser acordes con el nuevo régimen constitucional, deben ser adoptadas por
el Tribunal Constitucional Plurinacional.

V.1. La garantía de la competencia y las consecuencias de su afectación en la garantía de la


doble instancia en materia administrativa

Tal como se tiene dicho, en virtud al principio pro-actione, frente a lesiones manifiestas,
irreversibles y groseras a derechos fundamentales, excepcionalmente podrá tutelarse este
elemento del debido proceso a través de la acción de amparo constitucional, en ese orden, debe
señalarse que a partir de la separación de órganos, la función administrativa, debe ser ejercida a
través de competencias, atribuciones y potestades administrativas, las cuales se encuentran
sujetas a un bloque normativo imperante, el cual asegura un ejercicio imparcial y respetuoso de
derechos fundamentales por parte de la función administrativa.

De acuerdo a lo mencionado, estas competencias, atribuciones o potestades serán desarrolladas


por servidores públicos a los cuales la normativa imperante les encomiende expresamente dicho
ejercicio, por tanto, el ejercicio de estas por parte de un servidor público al cual la normativa no
le haya encomendado una competencia, atribución o potestad específica, implicará una
usurpación de competencia, aspecto que afecta la garantía de la competencia, resguardada de
manera específica por el art. 120.1 de la CPE.

La premisa antes referida, implica que además la vulneración a la garantía de la competencia,


puede también afectar otros elementos del debido proceso, como ser el derecho a la doble
instancia, el cual, como consecuencia directa de una usurpación de funciones, puede ser
manifiestamente afectado cuando el acto administrativo cuestionado no es objeto de revisión por
una autoridad diferente a la que originó la decisión, por tanto, al estar este presupuesto del
debido proceso específicamente reconocido en el bloque de constitucionalidad, en particular al
estar plasmado en el artículo 14.5 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,
inequívocamente, en caso de afectación, debe ser restituido por el órgano contralor de
constitucional, es decir por el Tribunal Constitucional Plurinacional; asimismo, todos los otros
derechos que como consecuencia directa de la afectación a la garantía de la competencia por
usurpación de roles sean afectados, deben ser también tutelados por el último y máximo garante
de los derechos fundamentales.

VI.1. Análisis del caso concreto


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1120
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Luego de haber desarrollado de acuerdo a los postulados de teoría constitucional los problemas
jurídicos planteados en el inicio de la parte argumentativa del presente fallo, a partir de los
mismos, corresponde ahora su aplicación en la presente problemática, tarea que será
desarrollada infra.

VI.1.1. En cuanto a la denuncia de usurpación de competencias de las autoridades


demandadas

Tal como se señaló en el Fundamento Jurídico III.1 de la presente disidencia, el Recurso Directo
de Nulidad, protege la garantía de la competencia contra actos o resoluciones concretos,
pronunciados en usurpación de competencias, premisa a partir de la cual, se establece que la
acción de amparo constitucional, es un mecanismo tutelar destinado a resguardar y en su caso
restituir derechos fundamentales no tutelados por otros medios de defensa, por cuanto, al estar la
garantía de la competencia resguardada por un medio de defensa específico, este presupuesto del
derecho al debido proceso, no se encuentra tutelado por la acción de amparo constitucional,
debiendo en este caso, activarse el Recurso Directo de Nulidad.

Ahora bien, en el Fundamento Jurídico 2 de esta disidencia, se señaló también que en el marco
de los postulados del Estado Constitucional de Derecho, el principio pro-actione, en casos de
manifiestas, irreversibles y groseras vulneraciones a derechos fundamentales, asegura la
prevalencia de la justicia material en relación a la justicia formal, por tanto, merced a esta pauta
con génesis directa en el artículo 29 de la Convención Americana de Derechos Humanos, a
través de la labor de ponderación de derechos, la justicia como valor rector del orden
constitucional, inclina la balanza para la tutela de derechos fundamentales que en caso de no
flexibilizarse los procedimientos establecidos consolidarían un atentando al Estado
Constitucional de Derecho, por ser irreversibles los efectos de la vulneración a derechos.

En el orden de ideas desarrollado, puede colegirse que toda denuncia referente a usurpación de
competencias, debe ser objeto de control de constitucionalidad a través del Recurso Directo de
Nulidad; sin embargo, frente a una grosera, irreversible y manifiesta lesión a la garantía de
competencia, las formalidades o presupuestos procesales para la activación del control de
constitucionalidad, deben flexibilizarse, por cuanto este aspecto de manera excepcional podrá
aperturarse a través de la acción de amparo constitucional para evitar así un grave e irreparable
atentado a la garantía de la competencia y por ende a las reglas del debido proceso.

En mérito a este razonamiento, en la especie, debe determinarse si existe una situación grave e
irreparable, plasmada en una grosera y manifiesta lesión a la garantía de competencia que
justifique la flexibilización excepcional de presupuestos procesales y la tutela de este aspecto a
través de la acción de amparo constitucional; entonces, por lo señalado y de acuerdo a los datos
que informan la presente causa, se tiene que por Resolución 024/2011 de 7 de mayo de 2011,
Bartolomé Puma Velásquez -autoridad ahora demandada-, en su calidad de Director
Departamental de Educación de Santa Cruz, resuelve el recurso de revocatoria interpuesto
por la parte accionante.

Posteriormente, como consecuencia del recurso jerárquico interpuesto por la parte ahora
accionante, mediante Resolución Administrativa 035/2011 de 18 de julio, también suscrita
por Bartolomé Puma Velásquez, en su calidad de Director Departamental de Educación de
Santa Cruz, esta autoridad resuelve el recurso jerárquico planteado.

De la compulsa de estas dos resoluciones, se establece que tanto la Resolución 023/2011 que
resuelve el recurso de revocatoria, como la Resolución Administrativa que resuelve el recurso
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1121
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

jerárquico interpuesto por la parte accionante, se encuentran suscritas por Bartolomé Puma
Velásquez, en su calidad de Director Departamental de Educación de Santa Cruz.

En el marco de los antecedentes referidos, debe precisarse que la garantía de competencia como
elemento del juez natural y por ende del debido proceso, en este caso debe ser tutelada de
manera excepcional mediante la presente acción de amparo constitucional, por existir en el caso
de autos una manifiesta, irreparable y grosera usurpación de competencias por parte de
Bartolomé Puma Velásquez. Por lo señalado, se colige que esta manifiesta vulneración a la
garantía de la competencia, por exigencias formales, no puede ser consentida ni menos aún
convalidada en un Estado Constitucional de Derecho, en ese orden, frente a esta grave
vulneración, en aplicación del principio pro-actione, no podría rechazarse la presente causa por
no activarse el mecanismo idóneo de tutela, es decir el Recurso Directo de Nulidad, un
razonamiento contrario, haría irreparable la lesión ocasionada a este presupuesto del debido
proceso.

Por lo señalado, la manifiesta y grosera usurpación de competencias antes señalada, incide


además de manera directa en la afectación del debido proceso en sede administrativa,
concretamente en relación a la garantía de la doble instancia, en virtud de la cual, las personas
tienen el derecho de que las decisiones asumidas a través de un recurso de revocatoria, sean
merced a un recurso jerárquico, revisados por una autoridad diferente a aquella que conoció y
resolvió la revocatoria planteada.

Asimismo, en la especie, la afectación de la garantía de la competencia vulnerada como


consecuencia de una manifiesta usurpación de competencias por parte de Bartolomé Puma
Velásquez, autoridad ahora demandada, al afectar también las reglas del debido proceso en su
elemento referente a la doble instancia, implican también una afectación del principio de
seguridad jurídica, directriz rectora de la función administrativa.

De la misma forma, las afectaciones antes referidas, vulneran también el derecho al trabajo, el
cual, se encuentra expresamente reconocido por el art. 46 de la CPE, en ese orden, se tiene que
en cuanto a este derecho, sin ser excluyentes, de acuerdo al régimen constitucional, conforman
su núcleo esencial dos aspectos esenciales: 1) El derecho al trabajo equitativo; y, 2) El derecho a
una fuente laboral en condiciones equitativas. En ese orden, el resolver un recurso jerárquico en
una manifiesta usurpación de competencias y confirmar una decisión que afecta directamente en
una fuente de trabajo, confirmando una decisión que en el caso concreto resuelve en primera
instancia y en contra de la accionante el descenso a su fuente de trabajo, implica también una
afectación del derecho a una fuente laboral en condiciones equitativas y al derecho al trabajo
equitativo. Asimismo, la confirmación en manifiesta usurpación de competencias de un ascenso
laboral, implica también afectación al contenido esencial del derecho a la seguridad social, el
cual se encuentra reconocido por el art. 45 de la CPE.

Siguiendo el análisis y considerando que la accionante denuncia además la vulneración al


derecho a la vida, se tiene que en el caso concreto, la afectación del derecho al debido proceso
en su elemento competencia, no tiene incidencia directa en el derecho a la vida de la accionante,
por lo que se concluye que este derecho no fue vulnerado.

VI.1.2. En cuanto a los otros actos denunciados como lesivos a los derechos de la
accionante

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1122


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Considerando que el primer acto será tutelado, por los efectos de la concesión de tutela, no
existe relevancia constitucional para analizar estos otros actos denunciados como lesivos, razón
por la cual, en estos supuestos, no se ingresará al análisis de la problemática.

VI.1.3. En cuanto al Director Distrital de Educación

Finalmente, debe establecerse que la parte accionante, activa el control tutelar de


constitucionalidad en contra del Director Distrital de Educación del Distrito III, en ese orden, de
la compulsa de antecedentes se tiene que en cuanto al primer acto denunciado como lesivo y el
cual será tutelado mediante la presente acción, no existe intervención de esta autoridad en la
suscripción de las resoluciones cuestionadas, por tanto, no puede concederse la tutela en relación
a esta parte demandada.

En base a la Fundamentación Jurídica precedente, la suscrita Magistrada considera que el


Tribunal Constitucional Plurinacional, en la parte dispositiva del fallo debió establecer lo
siguiente:

1º APROBAR parcialmente la Resolución de 2 de febrero de 2012, Sala Civil Primera del


Tribunal Departamental de Justicia del departamento de Santa Cruz; y, en consecuencia,
CONCEDER la tutela solicitada en cuanto a la vulneración al debido proceso, al derecho a la
doble instancia, el derecho al trabajo y una remuneración justa, seguridad social y no así respecto
al derecho a la vida.

2º Anular la resolución jerárquica 035/2011 de 18 de julio y, por ende, disponer la inmediata


corrección del procedimiento administrativo disciplinario, asegurando el derecho a la doble
instancia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo.Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños-Magistrada

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1123


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0141/2012


Sucre, 9 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de libertad
Expediente: 00033-2012-01 AL
Departamento: Pando

En revisión la Resolución 001/2012 de 7 de enero cursante de fs. 47 a 48 vta., pronunciada


dentro de la acción de libertad interpuesta por Jesús Mamani Ventura y Alejandro Flores
Huallpa en representación de Abrahan Tirina Puma contra Ponciano Ruiz Quispe, Vocal de
la Sala Penal y Administrativa, Antonio Fagalde Revilla, Vocal de la Sala Civil del
Tribunal Departamental de Justicia; y, René Zambrana, Juez Primero de Instrucción en lo
Penal; todos del departamento de Pando.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 6 de enero de 2012, cursante de fs. 5 a 6, los accionantes, a nombre
de su representado, señalan que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Dentro del proceso penal seguido contra su representado a denuncia de su cónyuge por el delito
de asesinato, interpuso recurso de apelación contra el Auto Interlocutorio 278/2011 de 13 de
diciembre, que le impuso medidas cautelares de detención preventiva, dictada por el Juez
Primero de Instrucción en lo Penal, ahora demandado, argumentando que dicha autoridad “no
podía convalidar actos considerados nulos de pleno derecho” (sic), toda vez que la denunciante
se encontraba comprendida dentro de las prohibiciones contenidas en el art. 35 del Código de
Procedimiento Penal (CPP); empero, los Vocales demandados, confirmaron el fallo impugnado,
sin manifestarse sobre los puntos apelados.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes, consideran vulnerados los derechos a la libertad y al debido proceso de su


mandante sin citar la norma Constitucional que los contiene.

I.1.3. Petitorio

Solicitan se declare procedente la acción de libertad, ordenándose la nulidad de la Resolución de


medida cautelar y la emisión de nuevo pronunciamiento.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 7 de enero de 2012, se produjeron los siguientes actuados.


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1124
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante, a nombre de su representado, solicitó que sean revocadas las Resoluciones
dictadas tanto por el Juez Primero de Instrucción en lo Penal, así como por los Vocales de la
Sala Penal y Administrativa en apelación, mismas que vulneraron los derechos de su defendido
al no considerar que, la investigación fue iniciada a denuncia de su esposa y que por disposición
expresa del art. 35 del CPP, su cónyuge no puede denunciarlo ni seguir acción penal, situación
que no fue tomada en cuenta por los demandados, quienes únicamente analizaron los arts. 233,
234 y 235 de la norma antes señalada, motivo por el cual, su mandante se encuentra ilegalmente
detenido.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Antonio Fagalde Revilla, Vocal de la Sala Penal y Administrativa, en audiencia manifestó que,
el representado de los accionantes fue detenido y sometido a medidas cautelares, toda vez que
los peligros de fuga y obstaculización fueron fundamentados, esta determinación fue apelada;
sin embargo, el recurso presentado, no hacía referencia a las medidas cautelares impuestas; en
consecuencia, se procedió a pronunciar resolución respecto al contenido de la apelación,
habiéndose confirmado la Resolución del Juez a quo.

Asimismo, señaló que la investigación se inició por denuncia de malos tratos presentada por la
supuesta concubina del imputado, siendo que durante la misma, surgió la denuncia del asesinato,
situación que motivó al Ministerio Público a iniciar las investigaciones respecto al ilícito.
Finalmente, si los accionantes, a nombre de su mandante, consideraron que la concubina no
podía presentar la denuncia, y que se habrían cometido vicios procesales, debió haber
interpuesto el incidente que correspondía y no acudir a la presente acción; es decir, se apeló el
Auto Interlocutorio 278/2011, pero sin la debida fundamentación y sin elementos probatorios
que demuestren que la denunciante, sea efectivamente la concubina del imputado.

A su turno, Ponciano Ruíz Quispe, Vocal de la Sala Penal y Administrativa, en su calidad de


codemandado, señaló que, la apelación presentada carece de fundamentos, toda vez que habla
sobre defectos absolutos que fueron considerados en el Auto Interlocutorio 278/2011; en lo
referente a la concubina, ese aspecto debió ser tramitado en otra vía; en consecuencia, de la
valoración de la prueba aportada por el Ministerio Público, se establece que la determinación
asumida por el Juez cautelar fue la correcta, motivo por el cual, solicita se deniegue la tutela.

El codemandado, René Zambrana, Juez Primero de Instrucción en lo Penal, pese a su legal


citación no remitió informe y tampoco se hizo presente en audiencia.

I.2.3. Resolución

Mediante Resolución 001/2012 de 7 de enero, cursante de fs. 47 a 48 vta., el Juez de Sentencia


del departamento de Pando, resolvió denegar la tutela solicitada, bajo el argumento de que los
accionantes, no presentaron prueba alguna que acredite que la denunciante sea esposa del
imputado; y, tampoco presentaron la Resolución emitida por los Vocales ahora demandados,
situación que impide verificar las aseveraciones vertidas en sentido de que las citadas
autoridades no se manifestaron sobre los puntos apelados y tampoco corrigieron las supuestas
vulneraciones cometidas contra su representado por el Juez a quo; en consecuencia, al no existir
certeza respecto a la vulneración de los derechos del representado de los accionantes, al no
haberse producido los elementos probatorios pertinentes, corresponde denegar la tutela.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1125


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional

Habiéndose procedido al sorteo de la presente causa en 15 de febrero de 2012, y en


consideración que los datos contenidos en el cuaderno procesal no eran suficientes para sustentar
el fallo, mediante Auto Constitucional (AC) 001/2012-CA/S de 17 de febrero, se solicitó la
remisión de documentación a la Sala Penal y Administrativa del Tribunal Departamental de
Pando, así como se dispuso la suspensión del plazo establecido para dictar Sentencia.

Habiéndose recibido la documental requerida, mediante providencia de 27 de marzo de 2012,


notificada a las partes, se dispuso el reinicio del cómputo, por lo que, la presente Sentencia, es
pronunciada dentro de plazo.

II. CONCLUSIONES

Del atento análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. El 11 de diciembre de 2011, Celia de la Cruz Palla, sentó denuncia formal en dependencias
de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) contra Abrahan Tirina Puma, por la
supuesta comisión de delito de asesinato, habiendo dispuesto el Fiscal de Materia III, la
aprehensión del acusado al existir suficientes indicios respecto a su participación o autoría en la
comisión del delito de asesinato previsto y sancionado por el art. 252.3 y 1 del CPP (fs. 11, 20 a
21).

II.2. Por memorial de 12 de diciembre de 2011, el Fiscal de Materia III, Juan Lionel Pizarro
Fuentes, presentó ante el Juez de Instrucción en lo Penal de turno de Cobija, imputación formal
contra Abrahan Tirina Puma, por la presunta comisión del delito de asesinato, previsto y
sancionado por el art. 252 del Código Penal (CP), solicitando su detención preventiva (fs. 26 a
31).

II.3. En audiencia de medidas cautelares celebrada el 13 de diciembre de 2011, los abogados del
imputado, solicitaron se declare la ilegalidad de la aprehensión, señalando que la misma no
había sido dispuesta mediante resolución fundamentada y que tampoco fue de conocimiento del
sindicado, por lo que, por Auto dictado en audiencia, se declaró la ilegalidad de la aprehensión;
en consecuencia, el Juez de la causa, pronunció el Auto Interlocutorio 278/2011, mediante el
cual dispuso la detención preventiva del imputado en el recinto penitenciario de Villa Busch,
con el argumento de que concurrían los riesgos establecidos en los numerales 1 y 2 del art. 233
del CPP; es decir, peligro de fuga y obstaculización, toda vez que el encausado no había
demostrado tener familia y trabajo estables, así como, existía la posibilidad de que éste pudiera
influenciar negativamente a los testigos, destruir o alterar prueba, máxime si al momento de su
detención intentó darse a la fuga y que, hasta la fecha, el arma de fuego no ha sido encontrada;
dejándose claramente establecido que la medida de detención preventiva impuesta contra el
imputado, “no es definitiva ya que la misma tiene carácter provisional, variable y temporal”
(sic), emitiendo la autoridad jurisdiccional, el correspondiente mandamiento a su detención
preventiva en la misma fecha (fs. 34 a 39).

II.4. El ahora representado por los accionantes, el 17 de diciembre de 2011, interpuso recurso de
apelación contra el Auto Interlocutorio 278/2011, señalando que la autoridad jurisdiccional, al
pronunciar la referida determinación omitió considerar que la denunciante era su esposa y que
por mandato del art. 35 del CPP, se encontraba dentro de las prohibiciones y limitaciones en el
ejercicio de la acción penal, situación que tampoco fue tomada en cuenta por la autoridad Fiscal,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1126
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

derivándose en la extrema medida de su detención preventiva que vulnera su derecho a la


seguridad jurídica y al debido proceso.

II.5. Mediante resolución de 3 de enero de 2012, la Sala Penal y Administrativa del Tribunal
Departamental de Pando, constituida en Tribunal de apelación, confirmó la resolución
impugnada (fs. 61 a 64).

III. FUNDAMENTOS JURIDÍCOS DEL FALLO

Los accionantes a nombre de su representado, señalan que, el Juez Primero de Instrucción en lo


Penal, omitió dar cumplimiento respecto a las prohibiciones contenidas en el art. 35 del CPP, y
que, habiendo recurrido en apelación contra el Auto Interlocutorio 278/2011, los Vocales
codemandados, convalidando los defectos absolutos en los que incurrió el Juez a quo, omitieron
pronunciarse sobre los vicos procesales denunciados, así como también respecto a la
prohibición, por mandato expreso del mencionado artículo, de que se reciba denuncia en su
contra por parte de su esposa. Corresponde analizar, si en el presente caso, se debe ingresar al
fondo de la problemática planteada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de libertad

Previo a ingresar al análisis del caso concreto, es necesario introducir el tema referido a la
naturaleza jurídica de la acción de libertad, puesto que de dicha esencia se podrá determinar la
viabilidad o no de la presente demanda.

Mediante la SCP 0037/2012 de 26 de marzo, este Tribunal sostuvo que: “La acción de libertad
conocida en el derecho comparado y en nuestra legislación abrogada como 'recurso de habeas
corpus', encuentra fundamento en innumerables instrumentos normativos de orden
internacional como en la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre,
Declaración Universal de Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, disposiciones normativas que forman parte del bloque de constitucionalidad, de
conformidad a lo dispuesto por el art. 410 de la CPE. Se trata de un mecanismo de defensa
constitucional extraordinario de carácter preventivo, correctivo y reparador, instituido para la
protección inmediata y efectiva de los derechos fundamentales a la libertad física como de
locomoción en casos de detenciones, persecuciones, apresamientos o procesamientos ilegales o
indebidos por parte de servidores públicos o de personas particulares; así como a la vida,
cuando esté en peligro.

Esta garantía de carácter procesal constitucional se encuentra consagrada en el art. 125 de la


CPE, donde dispone que: 'Toda persona que considere que su vida está en peligro, que es
ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de libertad personal,
podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o por cualquiera
a su nombre y sin ninguna formalidad procesal ante cualquier juez o tribunal competente en
materia penal, y, solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución indebida, se
restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad'. Norma
constitucional concordante con el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional
(LTCP), la cual establece que su objeto es la garantía, protección o tutela de los derechos a la
vida, a la libertad física y a la libertad de locomoción, para el restablecimiento inmediato y
efectivo de esos derechos, en los casos en que sean restringidos, suprimidos o amenazados de
restricción o supresión.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1127


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En tal sentido, debe señalarse que la ingeniería dogmática de la acción de libertad está
diseñada sobre la base de dos pilares esenciales, el primero referente a su naturaleza procesal y
el segundo, compuesto por los presupuestos de activación. En cuanto al primer aspecto que
configura el contenido esencial de esta garantía, es decir, su naturaleza procesal, se establece
que se encuentra revestida o estructurada con una tramitación especial y sumarísima, reforzada
por sus características de inmediatez en la protección, informalismo, generalidad e
inmediación; procede contra cualquier servidor público o persona particular, es decir, no
reconoce fueros ni privilegios. Postulados que pueden ser inferidos de la norma constitucional
antes referida.

Ahora bien, el segundo pilar que estructura el contenido esencial de esta garantía, se encuentra
configurado por sus presupuestos de activación, que al amparo del art. 125 de la CPE, se
resumen en cuatro: a) Atentados contra el derecho a la vida; b) Afectación de los derechos a la
libertad física como a la libertad de locomoción; c) Acto y omisión que constituya
procesamiento indebido; y, d) Acto u omisión que implique persecución indebida”.

III.2. Subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

En función a la naturaleza jurídica de esta acción tutelar y su alcance, glosados en el Fundamento


Jurídico precedente, a partir de la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, se establecieron los supuestos
de subsidiariedad excepcional de la acción de libertad, entendimiento que fue modulado a partir
de la SC 0008/2010-R de 6 de abril, que en lo pertinente señaló: “…en caso de existir
mecanismos procesales específicos de defensa que sean idóneos, eficientes y oportunos para
restituir el derecho a la libertad y a la persecución o procesamiento indebido, deben ser
utilizados previamente por el o los afectados; en estos casos por tanto, la acción de libertad
operará solamente en caso de no haberse restituido los derechos afectados a pesar de haberse
agotado estas vías específicas”; en consecuencia, toda persona sometida a proceso que
considere que en la sustanciación del mismo, las autoridades encargadas incurren en actos que
ocasionan lesión a sus derechos y garantías constitucionales o cuando se ha omitido aplicar la
norma o se la ha aplicado incorrectamente, se encuentra plenamente facultada para activar los
mecanismos intraprocesales que el ordenamiento jurídico prevé como medio idóneo para la
protección de sus bienes jurídicos, y si, aún después de haber agotado los medios en la vía
ordinaria, el actor considera que su pretensión no ha sido debidamente atendida y su derecho
restituido, recién se abre la competencia de la jurisdicción constitucional.

Bajo este razonamiento, la citada resolución estableció, que el incidente de actividad procesal
defectuosa constituye un mecanismo intraprocesal que debe ser activado previamente para el
cuestionamiento a decisiones y actos jurisdiccionales.

III.3. Configuración procesal de las medidas cautelares

El art. 221 del CPP, respecto a la finalidad y alcance de las medidas cautelares señala que “La
libertad personal y los demás derechos y garantías reconocidos a toda persona por la
Constitución Política del Estado, las Convenciones y Tratados Internacionales vigentes y este
Código, sólo podrán ser restringidos cuando sea indispensable para asegurar la averiguación de
la verdad, el desarrollo del proceso y la aplicación de la ley”, norma concordante con los arts.
13, 14.I, 22, 23.I y III de la Constitución Política del Estado (CPE), que determinan que ninguna
persona podrá ser privada de su derecho a la libertad sino es dentro de los límites señalados por
la ley que aseguren el descubrimiento de la verdad histórica de los hechos; es decir, la libertad
personal y los demás derechos y garantías reconocidos a toda persona por la Constitución
Política del Estado, las Convenciones y Tratados Internacionales vigentes, y la ley, sólo podrán
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1128
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ser restringidos cuando sea indispensable para asegurar la averiguación de la verdad, el


desarrollo del proceso y la aplicación de la ley.

Las medidas cautelares o actos coercitivos, así llamados por la doctrina, “…afectan por regla
general al imputado, a quien se puede restringir en el ejercicio de sus derechos personales (por
ejemplo, allanando su domicilio, abriendo su correspondencia, privándolo de su libertad de
tránsito o locomoción, etc.) o patrimoniales (por ejemplo, embargando sus bienes).”.

En este marco jurídico, conviene precisar que, las medidas cautelares se constituyen en
instrumentos procesales dentro de un proceso penal, que se imponen con el objeto de restringir
el ejercicio de los derechos personales o patrimoniales del imputado o de terceras personas y que
tienen como objetivo evitar los riesgos procesales que tiendan a obstaculizar el normal
desarrollo del proceso penal asegurando el efectivo cumplimiento de la posible condena; así lo
estableció la SC 0012/2006-R de 4 de enero al señalar que: “…las medidas cautelares tienen un
carácter instrumental y están dirigidas a lograr la eficacia de la coerción penal estatal, al
intentar asegurar con su aplicación: 1) la averiguación de la verdad, 2) el desarrollo del
proceso penal, y 3) el cumplimiento de la ley (ejecución de la sentencia); todo ello bajo la idea
de que sin su adopción, la labor de defensa social del Estado, expresada en la persecución
penal, no sería de modo alguno eficaz; diferenciándose así, plausiblemente, de otras
legislaciones que le asignan además de aquellos, fines de prevención general y especial.

En coherencia con lo expresado, en la parte in fine del segundo párrafo del mismo art. 221, se
precisa que las medidas '…sólo durarán mientras subsista la necesidad de su aplicación',
agregando el art. 222 del mismo código adjetivo que 'Las medidas cautelares de carácter
personal, se aplicarán con criterio restrictivo y se ejecutarán de modo que perjudiquen lo
menos posible a la persona y reputación de los afectados'”.

En consecuencia, podemos concluir señalando que, la medida cautelar no se traduce en un


castigo anticipado que busca y/o permite privar al individuo de su libertad; por el contrario,
conforme se anotó líneas arriba, es un instrumento que posibilita asegurar que el imputado esté
presente en el juicio ejerciendo su defensa y no obstaculice la averiguación de la verdad.

III.4. El recurso de apelación contenido en el art. 251 del CPP

Respecto a los medios de impugnación específicos para la impugnación de resoluciones sobre


medidas cautelares, la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, manifestó: “El Código de
Procedimiento Penal, dentro del sistema de recursos que dispensa a las partes, prevé el de
apelación contra las resoluciones que dispongan, modifiquen o rechacen las medidas
cautelares, que se muestra como un recurso sumario, pronto y efectivo, dado que conforme
establece el art. 251 del CPP, una vez interpuesto este recurso, las actuaciones pertinentes
deben ser remitidas ante el Tribunal Departamental de Justicia en el término de veinticuatro
horas, debiendo el tribunal de apelación resolver el recurso, sin más trámite y en audiencia
dentro de los tres días siguientes de recibidas las actuaciones.

No cabe duda que el recurso de apelación aludido, dada su configuración procesal, es un


recurso idóneo e inmediato de defensa contra supuestas lesiones y restricciones al derecho a la
libertad de los imputados, en el que el tribunal superior tiene la oportunidad de corregir, en su
caso, los errores del inferior invocados en el recurso. Es idóneo, porque es el recurso
adecuado, apropiado, establecido expresamente en la ley para impugnar las medidas cautelares
que vulneren el derecho a la libertad del imputado, en ocasión de la aplicación de las medidas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1129


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cautelares. Es inmediato, porque el recurso es resuelto sin demora, dado que la ley establece un
lapso brevísimo para su Resolución (tres días)” (las negrillas nos pertenecen).

En ese orden, respecto a su alcance y finalidad, el recurso de apelación de medidas cautelares se


encuentra circunscrito a su objeto; es decir, a resolver la impugnación de las medidas cautelares
dispuestas por el Juez cautelar, ya sea aprobando o revocando la resolución impugnada; así lo
estableció la SC 1554/2004-R de 27 de septiembre, al señalar que: “…el objeto del recurso de
apelación contra la Resolución de medidas cautelares, es precisamente la aplicación de tales
medidas, entonces, no podían dejar de pronunciarse sobre el objeto de la alzada, por cuanto
ello importa denegación de justicia, que ligada a la libertad, importa a su vez la privación
indebida de ese derecho, debiendo tomarse en cuenta que las vocales debieron resolver la
apelación aprobando o revocando la Resolución -si es que existían elementos probatorios que
determinaban que no le era aplicable al representado del recurrente la detención preventiva-
pero en ningún momento podían anular obrados por defectos absolutos pues las autoridades
demandadas tienen plena competencia para revisar y modificar la resolución revisada, ya que
ése es justamente el objeto del recurso” (las negrillas nos corresponden).

Para una mejor comprensión de lo aseverado supra y de la problemática planteada, ampliando el


objeto de estudio respecto al contexto jurídico normativo que se cuestiona, debe analizarse de
manera sistemática los arts. 168, 169, 251 y 398 del CPP, con la finalidad de establecer una
conexión jurídico-axiológica entre el recurso de apelación de medidas cautelares y la posibilidad
de denunciar a través de este recurso la existencia de vicios procesales; en consecuencia,
tenemos:

“Artículo 168.- (CORRECCIÓN).- Siempre que sea posible el juez o tribunal, de oficio o a
petición de parte, advertido el defecto deberá subsanarlo inmediatamente, renovando el acto,
rectificando el error o cumpliendo el acto omitido”.

Esta normativa faculta tanto a la autoridad judicial como a las partes, para que de oficio, en el
primer caso, o a petición de parte a través del incidente de actividad procesal defectuosa, en el
segundo, se subsanen los defectos que pudieran sobrevenir durante la tramitación del proceso; es
decir, la presente disposición procedimental, permite que a solicitud de parte o de oficio, la
autoridad que hubiera ejecutado un acto durante la tramitación del proceso que pudiera
ocasionar vicios o defectos en el proceso, podrá ser observada para su consiguiente rectificación
o subsanación.

“Artículo 169.- (Defectos Absolutos) No serán susceptibles de convalidación los defectos


concernientes a:

1) La intervención del juez y del fiscal en el procedimiento y a su participación en los actos en


que ella sea obligatoria;
2) La intervención, asistencia y representación del imputado, en los casos y formas que este
Código establece;
3) Los que impliquen inobservancia o violación de derechos y garantías previstos en la
Constitución Política del Estado, la Convenciones y Tratados Internacionales vigentes y en este
Código; y,
4) Los que esté expresamente sancionados con nulidad”.

“Artículo 251.- (Apelación) La resolución que disponga, modifique o rechace las medidas
cautelares, será apelable, en el efecto no suspensivo, en el término de setenta y dos horas.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1130


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Interpuesto el recurso, las actuaciones pertinentes serán remitidas ante la Corte Superior de
Justicia en el término de veinticuatro horas.

El tribunal de apelación resolverá, sin más trámite y en audiencia, dentro de los tres días
siguientes de recibidas las actuaciones, sin recurso ulterior”.

Es decir que, la resolución emanada en audiencia de medidas cautelares, puede ser impugnada a
través del recurso de apelación específicamente previsto para tal fin en la disposición
procedimental precitada, en cuya instancia el Tribunal de apelación podrá aprobar o revocar la
medida impuesta.

“Artículo 398.- (Competencia) Los Tribunales de alzada circunscribirán sus resoluciones a los
aspectos cuestionados de la resolución”.

De donde se colige que, sometida a impugnación una resolución, la autoridad superior en grado,
deberá centrar su atención a resolver si las lesiones alegadas son evidentes; así lo estable la SCP
0077/2012 de 16 de abril, al señalar “De la norma legal precedente [art. 398 del CPP], de manera
general es posible concluir que los tribunales de alzada sólo pueden resolver y pronunciarse sobre
los agravios expresados en la apelación, no pudiendo ir más allá de lo que la parte apelante no
hubiere cuestionado respecto de la resolución apelada, dado que el ámbito en el que deben
circunscribir su actuación es a resolver los aspectos impugnados de quien tiene derecho de
recurrir”.

De la interpretación sistemática y dogmática de la normativa procedimental penal glosada


precedentemente, se puede establecer que el recurso de apelación de medidas cautelares, posee
las siguientes características:

- Es un recurso de alzada pues es conocido por el órgano jurisdiccional superior en grado del que
dictó la resolución impugnada.
- Se dirige contra resoluciones que dispongan, modifiquen o rechacen las medidas
cautelares.
- No versa sobre cuestiones nuevas sino que está referido al contenido de la resolución
impugnada y a aquello que se declaró en el fallo.

En coherencia con lo señalado, es posible concluir que la norma contenida en el art. 251 del
CPP, prevé el recurso de apelación contra resoluciones que dispongan, modifiquen o rechacen
las medidas cautelares; por lo mismo, no podría versar sobre cuestiones ajenas a estas en razón a
que la competencia del Tribunal de apelación está circunscrito al contenido de la resolución
impugnada, es decir, a revisar y modificar en su caso la resolución que impuso dichas medidas.
En tal virtud, dada la naturaleza del recurso de apelación de medidas cautelares, éste sólo debe
constreñirse a resolver la impugnación de la decisión que determine la aplicación de alguna
medida cautelar, entre ellas, la detención preventiva.

Consecuentemente, la probable actividad procesal defectuosa que pueda suscitarse en el proceso,


debe ser denunciada a través de los mecanismos que el legislador prevé para el efecto;
salvo que dicha actividad procesal por defectos absolutos tenga directa causalidad con la
medida cautelar a ser impuesta, y con lógica incidencia en la restricción indebida de la
libertad; tratándose de la detención preventiva, los defectos absolutos denunciados
deberán tener directa incidencia con alguno de los presupuestos previstos en el art. 233 del
CPP. Situación en la cual el Tribunal de apelación deberá analizar la incidencia del vicio
absoluto denunciado en la medida cautelar impuesta a efectos de confirmar o revocar la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1131
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

imposición de la medida cautelar impugnada. Un razonamiento contrario, es decir, permitir


que cualquier denuncia de actividad procesal defectuosa pueda formar parte del contenido de los
agravios expuestos al momento de interponer el recurso de apelación de medidas cautelares, sin
su directa conexión con las mismas, implicaría generar disfunciones procesales y desnaturalizar
la teleología de los institutos procesales previstos por el legislador, esto es, el incidente de
actividad procesal defectuosa por vicios absolutos y el recurso de apelación de medidas
cautelares.

III.4. Interpretación del art. 35 con relación al art. 16 del CPP

El art. 35 del CPP, bajo el nomen juris (Prohibiciones y limitaciones en el ejercicio de la


acción penal), establece que “No podrán denunciar ni ejercitar la acción penal: el descendiente
en línea directa contra su ascendiente y viceversa, dentro del cuarto grado de consanguinidad o
por adopción; los parientes colaterales entre sí, dentro del segundo grado de consanguinidad o
por adopción; los cónyuges y convivientes entre sí; y el condenado por falso testimonio,
calumnia o soborno; salvo que lo hagan por delitos cometidos contra ellos o contra sus
ascendientes o descendientes, su cónyuge, convivientes o sus hermanos”.

Del análisis del marco jurídico glosado, el Tribunal Constitucional, mediante la SC 0938/2005-R
de 12 de agosto, precisó los alcances del art. 35 del CPP al señalar que: "…la prohibición de
denunciar y seguir una acción penal entre los parientes a que alude el art. 35 del CPP se
presenta cuando los delitos cometidos fueron perpetrados contra terceras personas diferentes a
ellos, es decir cuando ellos no son la víctima; sin embargo, el mismo art. 35 del CPP citado, en
su parte in fine determina parcialmente una excepción a esa prohibición, cuando reconoce que
la denuncia y consecuente acción penal entre los mismos puede darse si los delitos fueron
cometidos en forma directa contra ellos, contra sus ascendientes o descendientes, su cónyuge,
conviviente o sus hermanos. En consecuencia, la persecución penal por todo tipo de delitos es
posible entre hermanos en los supuestos descritos, aclarándose que en el caso de los delitos de
hurto, robo, extorsión, estafa, estelionato, apropiación indebida y daño que recíprocamente se
causen entre hermanos y cuñados, no existe sanción siempre y cuando se cumpla con la
condición de acreditar fehacientemente que viven juntos, lo que no impide que el damnificado
siga la acción civil que corresponda (art. 359 del CP)".

Sin embargo, tratándose de delitos de acción penal pública y respecto de delitos cometidos
contra terceros, corresponde realizar una interpretación sistemática de la norma prevista en el
art. 35 del CPP con lo señalado en el art. 16 del mismo cuerpo adjetivo, que dispone: “La acción
penal pública será ejercida por la Fiscalía, en todos los delitos perseguibles de oficio, sin
perjuicio de la participación que este Código reconoce a la víctima.

La acción penal pública será ejercida a instancia de parte sólo en aquellos casos previstos
expresamente en este Código.

El ejercicio de la acción penal pública no se podrá suspender, interrumpir ni hacer cesar, salvo
en los casos expresamente previstos por la ley”.

Asimismo, el art. 70 de la misma norma legal establece que corresponderá al Ministerio Público
dirigir la investigación de los delitos y promover la acción penal pública ante los órganos
jurisdiccionales. Con este propósito realizará todos los actos necesarios para preparar la
acusación y participar en el proceso, conforme a las disposiciones previstas en este Código y en
su Ley Orgánica.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1132


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Del texto señalado se tiene que la acción penal pública se encuentra a cargo de los órganos de la
persecución penal, esto es, el Ministerio Público, como director funcional de las investigaciones
y la Policía Boliviana como coadyuvante, acción penal pública que no puede ser suspendida,
interrumpida, salvo en los casos expresamente previstos por ley; en tal sentido, el mandato
prohibitivo contenido en el art. 35 CPP, no debe ser entendido en su literalidad, dando lugar a
concluir que en estos supuestos no podría proseguirse con el ejercicio de la acción penal pública
cuando el inicio de la investigación fue realizada a denuncia de quienes se encuentran
comprendidos en el citado precepto legal, y que por lo mismo, cualquier denuncia efectuada por
familiares, cuando se trata de la comisión de delitos de acción pública contra terceros, debe ser
considerada inválida, pues de interpretarse en tal sentido la norma analizada, daría lugar a
generar escenarios de impunidad, razonamiento no querido por el orden público.

Dicho de otra forma, si bien es evidente que la prohibición contenida en el art. 35 del CPP,
tiende a proteger valores legítimos como la integridad y cohesión de los vínculos familiares,
resguardando la armonía familiar como bien jurídico a ser protegido, y que por esta
circunstancia no podría obligarse a denunciar ni ejercitar la acción penal pública a quienes se
encuentren comprendidos en las causales prohibitivas de denuncia; sin embargo, el acto
voluntario de denuncia que efectuaren él descendiente en línea directa contra su
ascendiente y viceversa, dentro del cuarto grado de consanguinidad o por adopción; los
parientes colaterales entre sí, dentro del segundo grado de consanguinidad o por adopción;
los cónyuges y convivientes, no podrá impedir el inicio y la prosecución de la acción penal
pública, ocasión en la que, el Ministerio Público, en ejercicio de la facultad establecida en
el art. 16 del CPP respecto a todos los delitos perseguibles de oficio, por mandato del art.
70 del mismo compilado, deberá iniciar las investigaciones y promover la acción penal
contra el o los posibles autores; toda vez que de estimarse lo contrario, se incurriría en el
inadmisible razonamiento de no poder perseguir y sancionar la comisión de ilícitos
respecto de quienes se encuentran comprendidos en el art. 35 del CPP, generándose,
conforme se manifestó precedentemente, una espiral de impunidad amparada en lazos de
parentesco, que no puede ser tolerada en un Estado de Derecho; quedando así conciliadas
las normas penales de referencia.

Lo expuesto precedentemente, de ninguna manera implica que el denunciante, en estos


casos, deba constituirse en un instrumento para la realización de las investigaciones y
prosecución del proceso, debiendo en todo caso, tenerse presente que, en mérito al espíritu
del precepto legal contenido en la norma que se analiza, la actuación de los sujetos
comprendidos en la prohibición establecida en el art. 35 del CPP, concluye con la
presentación voluntaria de la denuncia, debiendo el Ministerio Público, en atención a las
atribuciones que le otorga su Ley Orgánica y en correspondencia con el Código de
Procedimiento Penal, dirigir las investigaciones hasta su conclusión.

III.5. Análisis del caso

De lo expuesto en el memorial de demanda y de la revisión de los actuados procesales adjuntos


al legajo, se tiene que, al representado de los accionantes, Abrahan Tirina Puma, por Auto
Interlocutorio 278/2011, se le impuso medida cautelar de detención preventiva, determinación
que fue recurrida en apelación, argumentando como agravio que, en la sustanciación del proceso
penal seguido en su contra, no se tomó en cuenta que, la denunciante era su esposa, por lo que se
encontraba dentro de las prohibiciones establecidas por el art. 35 del CPP.

Por Auto de 3 de enero de 2012, los Vocales de la Sala Penal y Administrativa, confirmaron la
Resolución impugnada, manifestando que, el apelante, no impugnó la imposición de las medidas
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1133
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cautelares respecto a la concurrencia de los peligros contenidos en los arts. 233, 234 y 235 del
CPP, sino que se apartó totalmente de aquella temática, base de la resolución impugnada, y
circunscribió su petitorio en torno al art. 35 del mismo compilado legal.
Del análisis de la Resolución emitida por los Vocales demandados, es posible concluir que
dichas autoridades, enmarcaron su actuación dentro del procedimiento previsto en el art. 251 del
CPP, normativa que regula el recurso de impugnación sobre medidas cautelares, en razón a que
la competencia del tribunal de apelación está circunscrito al contenido de la resolución
impugnada; es decir, a revisar y modificar en su caso la determinación que impuso la medida.
En tal virtud, dada la naturaleza de este recurso, éste sólo debe constreñirse a resolver la
impugnación de la decisión que determine la aplicación de alguna medida cautelar, entre ellas, la
detención preventiva, salvo que la actividad procesal por defectos absolutos denunciada tenga
directa causalidad con la medida cautelar a ser impuesta, y con lógica incidencia en la
restricción indebida de la libertad.

En el caso en análisis, si bien es evidente que el accionante a tiempo de interponer el recurso de


apelación contra la detención preventiva que le fue expuesta, argumentó su apelación
sustentándose únicamente en la supuesta existencia de vicio absoluto basándose en la
prohibición prevista en el art. 35 del CPP, sin impugnar propiamente la medida cautelar; no es
menos evidente que las autoridades demandadas, además de observar la falta de argumentación
incurrida en las acciones respecto de la medida cautelar de detención preventiva, enmarcando su
actuación dentro del procedimiento previsto en el art. 251 del CPP, analizaron la vinculación de
la prohibición contenida en el art. 35 del CPP, y manifestándose sobre el mismo, determinaron
en el Tercer Considerando de la Resolución de 3 de enero de 2012, ahora impugnada, que si
bien, inicialmente, la supuesta conviviente, en ocasión de haberse presentado a denunciar
maltrato familiar por parte de su cónyuge, denunció la presunta comisión del delito de asesinato,
motivo que supuestamente originaba la violencia doméstica; empero, en cumplimiento a lo
dispuesto por el art. 16, en relación con el art. 70 del CPP, el Ministerio Público, en
conocimiento de un delito de acción penal pública, dio inició a las investigaciones y procedió
con la formulación de la imputación formal contra el ajusticiado ante la autoridad jurisdiccional
competente, solicitando su detención preventiva al constatar la existencia de un cadáver y
presumiéndose la autoría del acusado, situaciones que permitieron concluir al Ministerio Público
que esa evidencia hacía presumir la comisión de un delito de mayor relevancia y de carácter
público que el de violencia doméstica denunciado inicialmente.

En este contexto, los demandados con este último pronunciamiento sobre el defecto absoluto
argüido por el ahora representado, circunscribieron su Resolución al razonamiento expuesto en
el Fundamento Jurídico III.3, en el entendido de abrir su competencia a efectos de analizar la
incidencia del vicio absoluto denunciado en la medida cautelar impuesta, para así confirmar o
revocar la misma; toda vez que, la probable actividad procesal defectuosa que pueda suscitarse
en el proceso, debe ser denunciada a través de los mecanismos que el legislador prevé para el
efecto; salvo que dicha actividad procesal por defectos absolutos tenga directa causalidad con la
medida cautelar a ser impuesta, y con lógica incidencia en la restricción indebida de la libertad;
situación que ocurrió en el presente caso.

Por lo expuesto, los Vocales de Sala Penal y Administrativa, ahora demandados, actuaron en
estricto apego a la normativa legal contenida en el art. 251 del CPP, y verificando que, el Juez a
quo, efectuó una razonable apreciación de los antecedentes del proceso y de las circunstancias
particulares del caso que fueron determinantes para decidir la necesidad de imponer al imputado
la medida de detención preventiva, al concurrir los presupuestos previstos por los arts. 233.1; y
2; 234.1 y 2; y 235.1 y 2 del CPP y que el incidente formulado en apelación, si bien estaba
vinculado con la medida cautelar, motivaron su decisión de mantener dicha medida realizando
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1134
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

una interpretación sistemática de lo previsto en el art. 35 del CPP y los arts. 16 y 70 de la misma
normativa; razonamiento que no lesiona los derechos reclamados por el accionante conforme se
ha señalado; por lo que no se evidencia que los Vocales ni el Juez demandados, hubieran
incurrido en lesión del derecho de libertad del representado de los accionantes.
En consecuencia, el Juez de garantías, al denegar la tutela, aunque con otros argumentos, ha
evaluado en forma correcta los datos del proceso y las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 del Tribunal
Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 001/2012 de 7 de
enero, cursante de fs. 47 a 48 vta., dictada por el Juez de Sentencia del departamento de Pando;
y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños.- Magistrada.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez.- Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0142/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00187-2012-01-AAC
Departamento: Santa Cruz

En revisión la Resolución 07/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 175 vta. a 177 vta.,
pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Sarah Mery Huanca
Ticona contra Bartolomé Puma Velásquez y Daniel Quispe Manchego, Director del Servicio
Departamental de Educación y Director Distrital III de Santa Cruz respectivamente.

I ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la acción

Mediante memorial presentado el 20 de enero de 2012, cursante de fs. 89 a 97 vta., la accionante


señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

a) Antecedentes que motivan la activación del control tutelar de constitucionalidad

Refiere la accionante haber ingresado a trabajar el año 1994 a la Unidad Educativa “Buenas
Nuevas” de la ciudad de Santa Cruz, centro educacional en el cuál desarrolló sus actividades
laborales ininterrumpidamente hasta marzo de 2009, fecha en la cual accedió a la Dirección de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1135
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la citada Unidad de enseñanza a través de un proceso de selección, correspondiente a la carrera


administrativa de la cual fue parte por más de veinticinco años, hasta que el 25 de abril de 2011,
notificada con la Resolución Administrativa (RA) 008/25-04-2011, Auto Final de proceso
disciplinario administrativo, se determina la cesación de sus funciones, aplicándosele la sanción
de “descenso a un cargo inferior” (sic).

Precisa la accionante que esta Resolución, fue impugnada mediante recurso de revocatoria el 29
de abril de 2011, emitiéndose en tal virtud, la RA 023/2011 de 27 de mayo, decisión
administrativa que ratifica el fallo emitido por el Tribunal Disciplinario Administrativo de la
Dirección Distrital de Educación III del departamento de Santa Cruz; asimismo, refiere que el 7
de julio de 2011, interpuso recurso jerárquico contra la indicada Resolución, procedimiento que
en su criterio, concluyó con el silencio administrativo positivo del Ministerio de Educación.

b) Actos denunciados como lesivos a los derechos de la ahora accionante

Luego de precisar los antecedentes antes referidos, la accionante denuncia los siguientes actos:
a) Las autoridades demandadas, “…no han querido dar cumplimiento a lo tácitamente
determinado por el Ministerio de Educación y que fuera solicitado mediante carta notariada de
fecha 7 de diciembre de 2011”; b) La errónea notificación en el domicilio de su abogado con la
resolución del recurso jerárquico 33/2011; c) La Resolución 33/2001, fue emitida en flagrante
usurpación de competencias, por haber sido firmada por las mismas autoridades que suscriben la
Resolución de recurso jerárquico; y, d) La omisión de remisión del recurso en el tercer día ante
el Ministerio de Educación.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante, alega la vulneración de sus derechos al debido proceso, seguridad jurídica,


derecho al trabajo, a la seguridad social y a la vida, citando al efecto los arts. 13, 14, 15, 37, 45,
46, 48.I, III y IV, 49.III, 109, 113, 115.II y 232 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

En su petitorio, de manera expresa solicita se le conceda la tutela constitucional y se ordene la


restitución inmediata a su cargo de Directora institucionalizada de la Unidad Educativa “Buenas
Nuevas A” de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, el pago de haberes devengados, la restitución
de su nombre en las planillas de pago de haberes del Ministerio de Educación, aportes a la
seguridad social a largo y corto plazo, bono de antigüedad y categoría. Asimismo, solicita se
mantenga firme la decisión asumida por el Ministerio de Educación y se declare nula la RA
33/2011, por ser atentatoria al debido proceso y a la seguridad jurídica.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 10 de febrero de 2012, encontrándose presentes la parte


accionante y demandada, en ausencia del representante del Ministerio Público, conforme consta
en acta de fs. 169 a 175 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La parte accionante ratificó plenamente el contenido de su acción, aclarando únicamente que el


Ministerio de Educación, al no resolver el recurso jerárquico planteado, en virtud del silencio
administrativo positivo, dio por válidos los reclamos efectuados, por lo que de acuerdo a lo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1136
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

establecido por la Ley de Procedimiento Administrativo (LPA) corresponde efectuar su


restitución al cargo del cual fue destituida.

I.2.2. Informe de los servidores públicos demandados

Los servidores públicos demandados, a través de sus abogados en audiencia manifestaron: 1) Los
derechos de la accionante no fueron violentados por cuanto se le siguió un proceso por faltas
cometidas en el desempeño de sus funciones; 2) El proceso de institucionalización no existe en
razón a que fue emitida la convocatoria para las Unidades Educativas Plurinacionales, motivo por
el cual todos los directores tienen que ser cambiados o “removidos” (sic); 3) La accionante no se
encuentra desamparada, por cuanto se hizo todo lo posible para que trabaje como docente en la
misma Unidad Educativa; 4) Asimismo no ha diferenciado la carrera administrativa de la carrera
docente establecida por el Decreto Supremo (DS) 23968, a la cual pertenecen todos los directores
de unidades educativas, tampoco conoce la vigencia del DS “212414”; y 5) Con la aplicación de la
Ley Avelino Siñani, ha sido posesionado un nuevo Director Distrital, por tanto la acción de amparo
constitucional se encuentra viciada de ausencia de legitimación pasiva.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz, pronunció el
Resolución 07/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 175 vta. a 177 vta., mediante el cual concedió
la tutela disponiendo la anulación de las Resoluciones relativas a los recursos de revocatoria y
jerárquico, en base a los siguientes argumentos de orden legal: a) La acción de amparo
constitucional está dirigida contra las autoridades que han firmado las Resoluciones que son
motivo de esta acción, es decir, la Resolución de recurso de revocatoria y jerárquico; b) “…si se ha
producido un cambio de autoridad de la Dirección Distrital de Educación III, la acción de amparo
va dirigida contra la función, la autoridad y no contra la persona, y en segundo lugar, la nueva
autoridad ha sido citada; se evidencia en la notificación su sello y su firma, es más los abogados
que se han apersonado en esta audiencia lo han hecho con un poder del Director Departamental y
con fecha actual, de manera que dado el carácter extensivo, habiendo producido un cambio de
autoridad, después de la presentación del recurso y con la aclaración de que la acción se dirige
contra la autoridad y no así contra las personas, este Tribunal concluye que tiene toda la
legitimación pasiva para ser demandada la autoridad, en la función que desempeña y que además
ha tomado conocimiento de este recurso” (sic); c) La normativa aplicable a autos es la Ley de
Procedimiento Administrativo, norma jerárquicamente superior al DS 23968; y, d) El debido
proceso fue vulnerado por no haber sido resuelto por las autoridades competentes que debieron
conocer el recurso de revocatoria; d) En cuanto al recurso jerárquico, establece este Tribunal que
éste no fue notificado oportunamente y fue dictado por la misma autoridad que resolvió el recurso
de revocatoria, vulnerándose consecuentemente las reglas del debido proceso.

I.3. Trámite procesal en el Tribunal Constitucional Plurinacional

Al no haber encontrado consenso en sala, el proyecto de la Magistrada Relatora Dra. Ligia Mónica
Velásquez Castaños, de conformidad al art. 30.I.6 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), se procedió a convocar al Presidente del Tribunal Constitucional
Plurinacional de Bolivia a fin de dirimir con su voto el caso en análisis.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1137
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.1. Cursa en antecedentes memorándum de designación expedido por el Ministerio de Educación


y Cultura de 30 de marzo de 2009, a través del cual, se designa a Mery Sarah Huanca Ticona,
Directora institucionalizada de la Unidad Educativa Evangélico “Buenas Nuevas”, en el Distrito
Escolar III del departamento de Santa Cruz, en este memorándum de forma expresa se inserta la
siguiente referencia “MEMORANDUM DE DESIGNACIÓN (Carrera Administrativa)” (sic) (fs.
11).

II.2. Por RA 008/25-04-2011, referente a Auto Final de proceso disciplinario administrativo,


suscrita por Daniel Quispe Manchego, en su calidad de Presidente; Jusbert Barrientos en su calidad
de Fiscal Promotor y Walter Ortiz Pozo, como Secretario Actuario todos del Tribunal Disciplinario
III, se resuelve aplicar a la ahora accionante, la sanción de descenso a un cargo inferior por faltas
graves, disponiéndose además su designación como profesora de acuerdo a su especialidad, en otra
unidad en la cual exista acefalía (fs. 26 a 31).

II.4. Por Resolución 023/2011 de 27 de mayo, Bartolomé Puma Velásquez, en su calidad de Director
Departamental de Educación de Santa Cruz, resuelve: Ratificar el fallo emitido por el Tribunal
Disciplinario Administrativo de la Dirección Distrital de Educación III del departamento de Santa Cruz,
en todos sus extremos, debiéndose devolver el expediente a su origen dentro del plazo legal, para su
legal notificación. Asimismo, se evidencia que con esta decisión se notifica a la ahora accionante el 22
de junio de 2011 (fs. 13 y vta.).

II.5. Por memorial de recurso jerárquico, dirigido a los miembros del Tribunal Departamental de
Educación Santa Cruz, recepcionado el 7 de julio de 2011, por la Dirección Departamental de
Educación de Santa Cruz; se evidencia que en el petitorio, se solicita la remisión de este
mecanismo de impugnación al superior en grado para que se anule todo el proceso (fs. 14 a 21).

II.6. Por la, RA 033/2011 de 20 de julio, suscrita por Bartolomé Puma Velásquez, en su calidad de
Director Departamental de Educación de Santa Cruz, el cual, en mérito al recurso jerárquico
interpuesto por la ahora accionante y remitido a esta instancia el 7 de julio de 2011, resuelve
rechazar dicho recurso en aplicación del art. 31 del DS 23968, argumentando que “de la revisión
del expediente se puede establecer que el expediente de referencia ya fue elevado ante la
autoridad departamental en grado de revisión, habiéndose emitido la correspondiente
resolución (las negrillas añadidas) (fs. 24 a 25).

II.7. En antecedentes y en el reverso de la Resolución antes descrita, cursa una nota en la cual reza:
“Notificada: Sara Mery Huanca Ticona; fecha: 20 de julio de 2011; hora: 17.00 pm” (sic), sin
embargo, no existe firma de recepción por parte de la ahora accionante (fs. 24 a 25).

II.8. Mediante memorial de 4 de agosto de 2011, la ahora accionante presenta memorial ante el Ministro
de Educación manifestando lo siguiente: “solicito a su autoridad para que por sección correspondiente,
autorice o gestione (que por ley corresponde) corra en traslado a su domicilio procesal, que es la ciudad
de la paz, último recurso con más su expediente completo de proceso disciplinario administrativo
instaurado en mi contra, ya que hace 21 días que se encuentra en el Tribunal Departamental de
Educación de Santa Cruz” (sic) (fs. 32).

II.9. Por nota de 7 de diciembre de 2011, dirigida a Daniel Quispe Manchego, en su calidad de
Director Distrital de Educación III, la ahora accionante, solicita la reincorporación a sus funciones
en la Unidad Educativa “Buenas Nuevas”, sustentando su pretensión en una respuesta favorable
por los efectos del silencio administrativo positivo consecuente de la presentación de un recurso
jerárquico ante el Ministerio de Educación (fs. 22 a 23).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1138


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.10. Se colige también que el 21 de marzo de 2011, fue emitida la RA 004/21-03-2011, por la
cual fue iniciado proceso administrativo contra Sara Mery Huanca Ticona, en calidad de Directora
del Nivel Primario de la Unidad Educativa Fiscal Evangélica “Buenas Nuevas”, por la supuesta
infracción del art. 10.II, incs. b), d), p) y art. 11, inc. a) de la Resolución Suprema (RS) 212414
(fs.35 a 37).

II.11. Cursa en antecedentes diligencia de notificación personal al Director Distrital de Educación


III, con la acción de amparo constitucional presentada por la ahora accionante, se colige además
que dicha actuación procesal el 8 de febrero de 2012, fue suscrita por Miguel Chávez Montenegro
en su calidad de Director Distrital de Educación. Asimismo, se evidencia que con la presente
acción de amparo constitucional, se notificó al Director Departamental de Educación, firmando en
constancia el asesor jurídico de esta instancia, Nelson Castro Liquitaya. (fs. 99). Asimismo, cursa
en antecedentes, RA 049/2012 de 3 de febrero, a través de la cual, Bartolomé Puma Velásquez, en
su calidad de Director Departamental designa a Miguel Angel Chávez Montenegro, Director
Distrital III (Fs. 136 a 137).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante alega la vulneración de sus derechos al debido proceso, la seguridad jurídica, al


trabajo, seguridad social y a la vida, toda vez que dentro del proceso disciplinario seguido en su
contra en su condición de Directora del nivel primario de la Unidad Educativa “Buenas Nuevas” de
la ciudad de Santa Cruz, el Tribunal disciplinario de la Dirección Distrital de Educación III del
departamento de Santa Cruz, le sancionó con el descenso a un cargo inferior, contra cuya
Resolución recurrió de revocatoria y jerárquico, último recurso que concluyó con el silencio
administrativo positivo por parte del Ministerio de Educación, por haber pasado noventa días
hábiles sin que dicha autoridad hubiera pronunciado Resolución, quedando ejecutoriado y con
calidad de cosa juzgada; señalando como actos lesivos, los siguientes: 1) El Director
Departamental de Educación de Santa Cruz emitió tanto la Resolución Jerárquica 033/2011, de 20
de julio, como la Resolución Revocatoria 023/2011 de 27 de mayo de 2011, usurpando
competencias del Ministerio de Educación; 2) Al haberse operado el silencio administrativo
positivo, el Director Distrital de Educación III de Santa Cruz -codemandado- debió cumplir y
ejecutar lo tácitamente determinado por el Ministerio de Educación, lo que no ocurrió conforme se
advierte del tenor del proveído de 12 de diciembre de 2011; 3) El Director Departamental de
Educación omitió remitir el recurso jerárquico en el tercer día ante el Ministerio de Educación; 4)
Se omitió requisitos esenciales de notificación a la accionante con la Resolución 033/2011. En
consecuencia corresponde determinar en revisión, si se concede o no la tutela solicitada.

III.1. El ejercicio de la potestad sancionadora disciplinaria del Estado debe respetar, entre
otras garantías, la garantía del debido proceso. Su sustento, el modelo de Estado
Constitucional de Derecho Plurinacional Comunitario e Intercultural

Conforme se desarrolló en la SCP 0112/2012 de 27 de abril, existen consecuencias del nuevo


modelo de Estado Constitucional de Derecho, Plurinacional Comunitario e Intercultural asumido
en la Constitución de 2009 en el razonamiento jurídico de los jueces a la hora de cumplir su labor
decisoria cotidiana. Entendimiento que se hace extensivo también, de manera general, en el
razonamiento jurídico de las servidoras y servidores públicos del Estado, del nivel central y
de las entidades territoriales autónomas, cuando ejerzan potestades administrativas, entre
ellas, la potestad sancionadora de la administración pública.

Una de las consecuencias, es que el razonamiento jurídico de las servidoras y servidores públicos
del Estado, del nivel central y de las entidades territoriales autónomas, debe partir de la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1139
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Constitución, de sus normas constitucionales-principios atendiendo las características del nuevo


modelo de Estado que los sustentan.

La referida Sentencia, señaló que: “Las normas constitucionales-principios en la Constitución


boliviana, son la pluralidad de valores, principios, derechos fundamentales no sólo individuales
(liberales y sociales) sino un amplio catálogo de derechos y garantías, principios y valores
plurales y colectivos que la constitución representa como un pacto de postulados distintos y hasta
veces contradictorios, pero que al final deben coexistir. En esta situación se requiere más
ponderación que subsunción, que transforme las promesas constitucionales en realidades
constitucionales”.

Más adelante dicha Sentencia Constitucional Plurinacional precisó que las normas constitucionales
principios: “…no son otra cosa que los valores, principios, derechos fundamentales y garantías
constitucionales, es decir, la 'moral objetivada-positivada', 'meta-normas' que informan, orientan
al poder público y a la convivencia social, las relaciones entre el ciudadano y el Estado y entre
particulares, que si bien se agotan en su positivización constitucional, empero encuentran una
construcción judicial constante, siempre y cuando se salvaguarde la unidad del ordenamiento, es
decir, su coherencia”. (las negrillas y el subrayado son agregados)

El mismo fallo, respecto al valor normativo, jerarquía y obligatoriedad de las normas


constitucionales principios, puntualizó que: “….las normas constitucionales-principios,
establecidos en el texto constitucional tienen validez normativa, prelación jerárquica y son
obligatorias respecto a las normas constitucionales-reglas y con mayor con relación respecto a las
normas legales-reglas (contenidas en las leyes en sentido general sustantivas o procesales) por el
sólo hecho de estar inscritas en la Constitución, una Constitución ideada dentro del modelo de
Estado Constitucional, con todo lo que ello implica”.

De esa concepción, respecto al ejercicio de la potestad sancionadora disciplinaria del Estado, se


desprenden dos temas, que se sustentan en normas constitucionales-principios del nuevo modelo de
Estado: 1) El fundamento de su ejercicio; y, 2) Los límites a ese ejercicio, que encuentran una barra
de contención en el respeto de garantías mínimas, siendo una de ellas, el debido proceso.

1) El ejercicio de la potestad sancionadora del Estado, en el ámbito disciplinario, permite a la


administración pública en sus distintos órganos e instituciones del nivel central y de las diferentes
entidades territoriales autónomas imponer sanciones a sus servidoras y servidores públicos para
garantizar que se cumplan los fines y funciones esenciales del Estado previstos en la Constitución
y la ley conforme refiere el art. 9 de la CPE, siendo ese su fundamento. En efecto, son la
Constitución, la legislación y reglamentación del nivel central y de las entidades territoriales
autónomas que en ese cometido le confieren a la administración pública la potestad y facultad de
aplicar, en vía disciplinaria, diversos tipos de sanciones a sus servidoras y servidores públicos.

2) Ahora bien, el ejercicio de la potestad de las entidades públicas de imponer sanciones


disciplinarias a sus propios servidores públicos, está subordinado y limitado al respeto de
determinadas garantías mínimas, entre ellas, la garantía del debido proceso, por cuanto ello
controla y limita el campo de acción de la potestad sancionadora del Estado, a efectos de evitar una
actividad arbitraria de la administración pública que se torne en ilícita. Ello, en aras de la
búsqueda de la materialización de los valores, en los que se sustenta el Estado Constitucional
de Derecho Plurinacional Comunitario e Intercultural (art. 8.II de la CPE), que en lo
conducente, al ámbito sancionador disciplinario, principalmente son el de justicia y armonía.
III.1.1. El debido proceso en el ejercicio de la actividad sancionadora del Estado

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1140


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

i) El debido proceso, está reconocido como derecho fundamental, garantía jurisdiccional y derecho
humano en las normas contenidas en los arts. 115.II y 117.I de la CPE, 8 de la Convención
Americana de Derechos Humanos (CADH) y 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos (PIDCP).

El art. 115.II de la CPE, reconoce que: “El Estado garantiza el derecho al proceso, a la defensa y a
una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones”.

A su vez, el art. 117.I de la CPE, consagra: ”Ninguna persona puede ser condenada sin haber sido
oída y juzgada previamente en un debido proceso. Nadie sufrirá sanción penal que no haya sido
impuesta por autoridad judicial competente en sentencia ejecutoriada”.

Por su parte el art. 8 de la CADH, señala:

1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable,
por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la
ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella, o para la determinación
de sus derechos y obligaciones de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.

2. Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se
establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda persona tiene derecho, en plena
igualdad, a las siguientes garantías mínimas:

a) Derecho del inculpado de ser asistido gratuitamente por el traductor o intérprete, si no


comprende o no habla el idioma del juzgado o tribunal;
b) Comunicación previa y detallada al inculpado de la acusación formulada;

c) Concesión al inculpado del tiempo y de los medios adecuados para la preparación de su defensa;
d) Derecho del inculpado de defenderse personalmente o de ser asistido por un defensor de su
elección y de comunicarse libre y privadamente con su defensor;

e) Derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el Estado, remunerado
o no según la legislación interna, si el inculpado no se defendiere por sí mismo ni nombrare
defensor dentro del plazo establecido por la ley;

f) Derecho de la defensa de interrogar a los testigos presentes en el tribunal y de obtener la


comparecencia, como testigos o peritos, de otras personas que puedan arrojar luz sobre los hechos;

g) Derecho a no ser obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse culpable,


h) Derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior.

3. La confesión del inculpado solamente es válida si es hecha sin coacción de ninguna naturaleza.

4. El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo juicio por los
mismos hechos.

5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar los intereses de la
justicia” (las negrillas son nuestras).

ii) La jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), -que forma


parte del bloque de constitucionalidad según la SC 0110/2010-R de 10 de mayo-,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1141
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

interpretando el art. 8 de la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH) ha


entendido que el respeto y protección del debido proceso es también aplicable en el ámbito de
la potestad sancionadora de la Administración Pública

Así en el caso Baena Ricardo y otros Vs. Panamá (Sentencia de 2 de febrero de 2001, Fondo,
Reparaciones y Costas) entendió que: “… cualquier actuación u omisión de los órganos estatales
dentro de un proceso, sea administrativo sancionatorio o jurisdiccional, debe respetar el debido
proceso legal”, derecho que “… es un derecho humano el obtener todas las garantías que
permitan alcanzar decisiones justas, no estando la administración excluida de cumplir con este
deber. Las garantías mínimas deben respetarse en el procedimiento administrativo y en cualquier
otro procedimiento cuya decisión pueda afectar los derechos de las personas” (párrafos 124 y
127).

El mismo órgano interamericano de protección derechos humanos, en el caso del Tribunal


Constitucional Vs. Perú (Sentencia de 31 de enero de 2001, Fondo, Reparaciones y Costas) a partir
de la interpretación del art. 8 de la CADH, señaló:

“El respeto a los derechos humanos constituye un límite a la actividad estatal, lo cual vale para
todo órgano o funcionario que se encuentre en una situación de poder, en razón de su carácter
oficial, respecto de las demás personas. Es, así, ilícita, toda forma de ejercicio del poder público
que viole los derechos reconocidos por la Convención. Esto es aún más importante cuando el
Estado ejerce su poder sancionatorio, pues éste no sólo presupone la actuación de las autoridades
con un total apego al orden jurídico, sino implica además la concesión de las garantías mínimas
del debido proceso a todas las personas que se encuentran sujetas a su jurisdicción, bajo las
exigencias establecidas en la Convención” (párrafo 68).

“Si bien el artículo 8 de la Convención Americana se titula “Garantías Judiciales”, su aplicación


no se limita a los recursos judiciales en sentido estricto, “sino el conjunto de requisitos que deben
observarse en las instancias procesales” a efecto de que las personas puedan defenderse
adecuadamente ante cualquier tipo de acto emanado del Estado que pueda afectar sus
derechos”(párrafo 69).
“Ya la Corte ha dejado establecido que a pesar de que el citado no especifica garantías mínimas
en materias que conciernen a la determinación de los derechos y obligaciones de orden civil,
laboral, fiscal o de cualquier otro carácter, el elenco de garantías mínimas establecido en el
numeral 2 del mismo precepto se aplica también a esos órdenes y, por ende, en ese tipo de
materias el individuo tiene también el derecho, en general, al debido proceso que se aplica en
materia penal” (párrafo 70).

“De conformidad con la separación de los poderes públicos que existe en el Estado de Derecho, si
bien la función jurisdiccional compete eminentemente al Poder Judicial, otros órganos o
autoridades públicas pueden ejercer funciones del mismo tipo. Es decir, que cuando la
Convención se refiere al derecho de toda persona a ser oída por un “juez o tribunal competente”
para la “determinación de sus derechos”, esta expresión se refiere a cualquier autoridad pública,
sea administrativa, legislativa o judicial, que a través de sus resoluciones determine derechos y
obligaciones de las personas. Por la razón mencionada, esta Corte considera que cualquier
órgano del Estado que ejerza funciones de carácter materialmente jurisdiccional, tiene la
obligación de adoptar resoluciones apegadas a las garantías del debido proceso legal en los
términos del artículo 8 de la Convención Americana” (las negrillas nos corresponden) (párrafo
71).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1142


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

iii) La jurisprudencia constitucional, del mismo modo, interpretando el contenido del debido
proceso, entendió que este se aplica a toda actividad sancionadora del Estado sea en el
ámbito jurisdiccional o administrativo

En ese sentido la SC 0042/2004, de 22 de abril, del Tribunal Constitucional anterior señaló que:

“…toda actividad sancionadora del Estado, sea en el ámbito jurisdiccional o administrativo,


debe ser impuesta previo proceso, en el que se respeten todos los derechos inherentes a la
garantía del debido proceso, entre los cuales se encuentra el derecho a la defensa, que implica a
su vez, entre otros elementos, la notificación legal con el hecho que se le imputa al afectado, y con
todas las actuaciones y resoluciones posteriores, la contradicción y presentación de pruebas
tendentes a desvirtuar la acusación, la asistencia de un defensor, el derecho pro actione ó a la
impugnación; asimismo, el derecho a la defensa, se relaciona directamente con los derechos a la
igualdad de las partes ante la ley y ante su juzgador, al juez natural y a la seguridad” (las
negrillas nos pertenecen).

Y respecto al debido proceso disciplinario en la SC 0022/2006 de 18 de abril, el mismo órgano


jurisdiccional señaló: “…el derecho administrativo disciplinario, por afectar la esfera de
autodeterminación de las personas mediante la imposición de sanciones personales, alberga los
principios del Derecho Penal en cuanto al debido proceso…”.

El Tribunal Constitucional aplicó este entendimiento a infinidad de casos que fueron resueltos en
su jurisdicción entendiendo que todos los principios y garantías propias del derecho penal se
aplican también extensivamente en el ámbito administrativo sancionador.

III.1.2. El recurso de revocatoria y el recurso jerárquico como medios de impugnación en la


vía administrativa disciplinaria sancionadora (formas procesales) tienen la finalidad de
asegurar la eficacia material del derecho a la doble instancia o de recurrir ante un tribunal
superior y el derecho a la defensa en la fase impugnativa

Desde la concepción del Estado Constitucional de Derecho, la tramitación de los procesos


judiciales o administrativos no debe constituirse en simples enunciados formales (justicia formal,
como mera constatación de cumplimiento de las formas procesales), sino debe asegurar la plena
eficacia material de los derechos fundamentales procesales y sustantivos (justicia material, debido
proceso y sus derechos fundamentales constitutivos, así como de los derechos fundamentales
sustantivos).

Al respecto, como ejemplo, corresponde recordar la jurisprudencia del Tribunal Constitucional anterior,
cuando en la línea jurisprudencial construida a partir de SC 1845/2004-R de 30 de noviembre, entendió
que la forma procesal de las notificaciones (en sentido genérico) en los procesos judiciales o
administrativos, no está dirigida a cumplir una formalidad en sí misma, sino que su valor está
condicionado en la medida que asegure la eficacia material del derecho a la defensa. Por ello, dicha
Sentencia concluyó que cuando la notificación por defectuosa que sea en su forma (por ejemplo no se
cumplan las formas procesales para la notificación personal, cedularia, edictal, etc.), pero cumplan con
su finalidad (hacer conocer la comunicación en cuestión) y, por ende, aseguren la eficacia material del
derecho a la defensa, esa notificación es válida.

De ahí que es posible concluir que el reconocimiento de los típicos medios de impugnación de los
actos administrativos, reconocidos en el orden legal (Ley de Procedimiento Administrativo), a
través de dos instancias: el recurso de revocatoria y el recurso jerárquico, son formas procesales
de impugnación en sede administrativa, instituidas por el legislador, con base en las cuales
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1143
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

debe procederse en la vía de impugnación, es decir, es el procedimiento del ordenamiento


interno del Estados que prevé dos instancias,las que no están dirigidas a cumplir una
formalidad procesal en sí misma, sino que tienen valor en la medida que aseguren la eficacia
material de los siguientes derechos fundamentales y garantías constitucionales: i) Derecho a la
doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior en el ámbito disciplinario sancionador y, su
nexo con ii) El derecho a la defensa en la fase impugnativa.

Es decir, en el caso, las formas del procedimiento administrativo sancionador en sus diferentes fases,
guardarán correspondencia y coherencia con el derecho al debido proceso en la medida en que se
aseguren su eficacia.

Dado el carácter sancionador del proceso disciplinario, éste -en todas sus fases o instancias- tiene
que sustanciarse y resolverse garantizando el debido proceso, que tiene como componente esencial
el derecho a la defensa. En efecto si se analiza la fase de impugnación del proceso disciplinario en
sede administrativa, es posible concluir que sólo puede predicarse la eficacia material del derecho
a la defensa (art. 115.II de la CPE y 8.2 inc. f) de la CADH) cuando se otorga a las servidoras y
servidores públicos la oportunidad de ejercer un otro derecho fundamental, este es: el derecho a la
doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior (art. 8.2 inc. h) de la CADH y 14.5 del
PIDCP)

El art. 8.2.h de la CADH, señala: “Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se
presuma su inocencia mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso,
toda persona tiene derecho, en plena igualdad, a las siguientes garantías mínimas: h) derecho de
recurrir del fallo ante juez o tribunal superior” (las negrillas añadidas).

Por su parte, el art. 14.5 del PIDCP, estipula: “Toda persona declarada culpable de un delito tendrá
derecho a que el fallo condenatorio y la pena que se le haya impuesto sean sometidos a un
tribunal superior, conforme a lo prescrito por la ley” (las negrillas nos pertenecen).

La Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Herrera Ulloa Vs. Costa Rica (Sentencia de 2
de julio de 2004, Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas) precisando el alcance del
“derecho a recurrir el fallo ante juez o tribunal superior”, estableció, en lo que en el caso interesa, las
siguientes afirmaciones, cuyo subrayado es añadido:

1. El derecho de recurrir el fallo es una garantía primordial que se debe respetar en el marco del
debido proceso legal, en aras de permitir que una sentencia adversa pueda ser revisada por un
juez o tribunal distinto y de superior jerarquía orgánica (párrafo 158).

2. El derecho de recurrir “… busca proteger el derecho de defensa otorgando durante el proceso la


posibilidad de interponer un recurso para evitar que quede firme una decisión que fue adoptada con
vicios y que contiene errores que ocasionarán un perjuicio indebido a los intereses de una persona”
(párrafo 158).

3. Independientemente de la denominación que se le de al recurso existente para recurrir un fallo, lo


importante es que dicho recurso garantice un examen integral de la decisión recurrida (párrafo 165)

En el caso de un proceso administrativo disciplinario sancionador, el derecho a la doble instancia o


de recurrir ante una instancia superior, permite que la instancia superior, conozca y revise la
resolución pronunciada por el tribunal de primera grado. Instancia superior que debe ser diferente a
la que emitió la decisión administrativa sancionadora en primera instancia, a efectos de que, la

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1144


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

servidora o el servidor público, impugnando o controvirtiendo una decisión sancionatoria,


obtengan la revisión de la decisión ante la instancia superior.

III.2. El caso de examen

De la acción de amparo interpuesta por la accionante en su condición de Directora del nivel primario de
la Unidad Educativa Buenas Nuevas de la ciudad de Santa Cruz, se tienen los siguientes actos
denunciados como lesivos que -a juicio de la impetrante- vulneraron sus derechos al debido proceso, la
seguridad jurídica, al trabajo, seguridad social y a la vida: 1) Refiere que el Director Departamental de
Educación, usurpando competencias del Ministerio de Educación, emitió tanto la Resolución de
revocatoria como la jerárquica; 2) Señala que al haberse operado el silencio administrativo positivo, el
Director Distrital de Educación III de la ciudad de Santa Cruz -codemandado- debió cumplir y ejecutar
tácitamente determinado por el Ministerio de Educación, lo que no ocurrió conforme se advierte del
tenor del proveído de 12 de diciembre de 2011; 3) Alega que el Director Departamental de Educación
omitió remitir el recurso jerárquico en el tercer día ante el Ministerio de Educación; 4) Señala que se
omitió requisitos esenciales de notificación a la accionante con la Resolución 033/2011

III.2.1. Sobre el pronunciamiento del recurso jerárquico por la misma autoridad


administrativa pública que resolvió el recurso de revocatoria y la vulneración al debido
proceso

De los antecedentes del caso se evidencia que dentro del proceso disciplinario seguido contra la
accionante en su condición de Directora del nivel primario de la Unidad Educativa “Buenas Nuevas” de
la ciudad de Santa Cruz, Bartolomé Puma Velásquez, Director Departamental de Educación de
Santa Cruz -codemando- pronunció tanto la Resolución de revocatoria 023/2011 de 27 de mayo
(Conclusión II.4) como la Resolución jerárquica 033/2011 de 20 de julio (Conclusión II.6).

De este hecho, por demás lesivo a derechos fundamentales y garantías constitucionales como se
precisará más adelante, se desprende varios razonamientos:

1) Que en el proceso disciplinario sustanciado contra la ahora accionante, se suprimió la


posibilidad de que la Resolución Administrativa sancionatoria en su contra (RA 008/25-04-2011,
que resolvió aplicarle la sanción de descenso a un cargo inferior y designarla a otra Unidad
Educativa en calidad de profesora) pueda ser revisada por un tribunal distinto y de superior
jerarquía orgánica (CIDH, caso Herrera Ulloa Vs. Costa Rica, Sentencia de 2 de julio de 2004,
Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas).

2) En los hechos, fue procesada y sancionada disciplinariamente en única instancia, precisamente


por la supresión de la posibilidad de impugnar la decisión sancionatoria cuestionada de adversa por un
tribunal distinto y de superior jerarquía orgánica.

Ello ocasionó que el proceso disciplinario sancionador contra la accionante, que goza de garantías
mínimas, una de ellas, el debido proceso, se convierta en un proceso de única instancia de facto,
cuando el legislador ha reconocido la doble instancia instituyendo precisamente el recurso de
revocatoria y el recurso jerárquico, conforme a los cuales deben procederse en la vía de
impugnación administrativa. Recursos administrativos que como se analizó anteriormente no están
dirigidos a cumplir una formalidad procesal en sí misma, sino que tienen valor en la medida
que aseguren la eficacia material de los derechos a la doble instancia o de recurrir ante un
tribunal superior en el ámbito disciplinario sancionador y el derecho a la defensa en la fase
impugnativa.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1145


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Es decir, como efecto de la supresión del recurso jerárquico, también fueron suprimidos los
derechos fundamentales referidos, los que reconocen a quienes han intervenido en un proceso
disciplinario sancionador la posibilidad de controvertir, impugnar o cuestionar la resolución
sancionatoria de primera instancia ante una autoridad administrativa superior y diferente a la que
emitió la sanción, para que ésta revise y corrija los defectos, vicios o errores jurídicos en los que
hubiera podido incurrir la autoridad de primera instancia. Situación que la presente acción de
amparo constitucional debe corregir, dado que su ámbito de protección de acuerdo a la norma
contenida en el art. 128 de la CPE, “…tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o indebidos
de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley” (negrillas y subrayado nos corresponden).

De otro lado, ese acto ilegal, ocasionó que el ejercicio de la potestad sancionadora disciplinaria de la
Administración Pública reconocido por el orden constitucional se convierta en arbitrario e ilícito, al no
haber encontrado límites en el respeto de garantías mínimas, entre ellas, la garantía del debido proceso,
el que en su dimensión de principio es el que debe guiar el ejercicio de la potestad sancionadora
disciplinaria de la administración del Estado.

En cuyo mérito, la ratio decidendi (razón de la decisión) de la concesión de la presente acción de


amparo constitucional, se encuentra en este apartado (Fundamento Jurídico III.2.1).

III.2.2. Respecto a los otros actos denunciados como lesivos

La accionante también señala otros actos denunciados como lesivos, los siguientes: a) La omisión
del Director Departamental de Educación de remitir el recurso jerárquico en el tercer día ante el
Ministerio de Educación; b) La omisión de requisitos esenciales de notificación a la accionante con
la Resolución 033/2011; y c) El incumplimiento a una decisión estimatoria por parte del Ministerio
de Educación, emergente de las consecuencias jurídicas del silencio administrativo positivo. Al
respecto, corresponde señalar que considerando que la ratio decidendi (razón de la decisión) de la
concesión de la presente acción de amparo, se encuentra en este apartado (Fundamento Juridico
III.2) y que los efectos de la tutela conllevará la nulidad de la Resolución jerárquica 033/2011 de
20 de julio, no existe relevancia constitucional para analizar estos otros actos denunciados como
lesivos, aclarándose que respecto al punto d) La nulidad de la resolución jerárquica, determina que
no exista resolución alguna que deba ser cumplida y ejecutada.

III.3. La legitimación pasiva de los servidores públicos demandados

III.3.1. La interpretación del art. 77.2 de la LTCP, respecto a la legitimación pasiva de los
funcionarios públicos en cesantía

De otro lado, teniendo en cuenta lo aseverado por las autoridades demandadas, en el informe
presentado ante el Tribunal de garantías, en sentido que en aplicación de la Ley Avelino Siñani, fue
posesionado un nuevo Director Distrital de Educación III de Santa Cruz, el cual no fue identificado
ni demandado en la presente acción, es preciso realizar las consideraciones que siguen.

El régimen constitucional vigente a partir del referendo constitucional de 2009, diseña un nuevo
modelo de Estado, cuyo sustento estructural, encuentra razón de ser en el respeto a los derechos
fundamentales insertos en el bloque de constitucionalidad, reconocido por el art. 410 de la CPE, en
ese contexto, este pilar esencial del Estado Plurinacional de Bolivia tiene validez material con la
disciplina constitucional expresa de las acciones de defensa, las cuales constituyen garantías
adjetivas eficaces y oportunas para la defensa de los derechos de las personas.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1146


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En el marco de lo señalado, la acción de amparo constitucional, está configurada como un


verdadero mecanismo idóneo, oportuno y eficaz para la tutela de derechos fundamentales, cuando
su protección no se encuentre dentro del ámbito de aplicación de otros mecanismos de defensa o
pueda ser tutelada por otros idóneos de defensa a los derechos fundamentales.

De acuerdo al postulado precedentemente citado, debe precisarse además que el Estado


Plurinacional de Bolivia, en su diseño y postulados, responde a la ingeniería propia del Sistema
Interamericano de Protección de Derechos Humanos, cuya construcción dogmática e institucional,
fue realizada en el marco de los alcances y preceptos contenidos en la Convención Americana de
Derechos Humanos, en ese orden, este instrumento supranacional inserto en el bloque de
constitucionalidad boliviano, en su art. 25.1, establece: “Toda persona tiene derecho a un recurso
sencillo y rápido o a cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la
ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley
o la presente Convención…”.

A partir de este mandato, se establece que la acción de amparo constitucional disciplinada de


manera específica en los arts. 128 y 129 de la CPE, en su diseño constitucional, responde de
manera directa al art. 25 de la referida Convención, toda vez que su contenido esencial está
estructurado sobre la base de los principios de sumatoriedad e inmediatez, a partir de los cuales se
consagra la vigencia en este nuevo modelo de Estado, de un mecanismo de tutela pronto y
oportuno, para el resguardo de derechos fundamentales frente a actos u omisiones lesivas a estos
provocadas por servidores públicos o particulares.

En armonía con lo expuesto, debe señalarse que la acción de amparo constitucional, en su


dimensión procesal, es un verdadero proceso de naturaleza constitucional al cual le son
aplicables presupuestos propios de Teoría Procesal General, siempre en el marco de la naturaleza
jurídica de este mecanismo oportuno y pronto de tutela de derechos fundamentales y de acuerdo a
los postulados propios del Derecho Procesal Constitucional, cuyos postulados procedimentales
rigen el ejercicio de la justicia constitucional.

En efecto, precisamente a la luz de la dimensión procesal de la acción de amparo constitucional, en


el marco de presupuestos aportados por la doctrina del Derecho Procesal Constitucional, y del
principio de interpretación “de y conforme a la Constitución” y de acuerdo a pautas hermenéuticas
específicas como ser el criterio exegético y teleológico de interpretación, infra, se desarrollará una
coherente argumentación jurídica que contemple la interpretación del art. 77.2 de la LTCP, para los
supuestos de identificación de autoridades demandadas en cesantía.

En el orden de ideas señalado, se tiene que el tenor literal del artículo 77.2 de la LTCP, establece lo
siguiente: “La Acción de amparo constitucional será presentada por escrito, con los siguientes
requisitos: 2. Indicar el nombre y domicilio de la parte demandada, o de su representante legal y el
de los terceros interesados”.

Del tenor literal de la norma citada y siguiendo una pauta teleológica de interpretación, se tiene que
el precepto descrito tiene la finalidad de asegurar el derecho a la defensa de la parte demandada,
aspecto que es plenamente coherente con la naturaleza procesal de la acción de amparo
constitucional, toda vez que al ser este mecanismo un verdadero proceso de naturaleza
constitucional, le son aplicables las reglas de un debido proceso, en mérito de las cuales, se debe
asegurar el principio de igualdad procesal expresamente reconocido por el art. 119 de la CPE,
razón por la cual, el precepto normativo citado, exige al accionante la identificación y la precisión
de su domicilio, tal como se dijo, para asegurar una igualdad procesal.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1147


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En coherencia con lo señalado, debe especificarse que la acción de amparo constitucional, en su


dimensión procesal, se divide en cuatro fases específicas: a) La fase de admisibilidad; b) La fase de
debate, es decir, del desarrollo de la audiencia pública; c) La fase de la decisión; y d) La fase de
revisión ante el Tribunal Constitucional Plurinacional.

De acuerdo al objeto y causa de la presente acción y en mérito al problema jurídico planteado en el


caso de autos, es de interés para una coherente argumentación jurídica, armonizar la exigencia
contenida en el art. 77.2 de la LTCP, con los postulados procesales insertos en la fase de
admisibilidad de la acción de amparo constitucional, razón por la cual, debe establecerse que la
exigencia de identificación de la parte demandada y la precisión de su domicilio constituyen
una carga procesal para la parte accionante cuya observancia debe ser verificada por los
jueces y tribunales de garantías en la etapa de admisibilidad para asegurar así el derecho a la
igualdad procesal de las partes y su derecho a la defensa, en este marco, en caso de incumplir la
parte accionante con esta carga procesal, los jueces y tribunales de garantías, deberán ordenar su
subsanación en plazo judicial razonable y lo más favorable posible para una tutela
constitucional efectiva y un acceso oportuno a la justicia constitucional.

En el marco de las reglas de un debido proceso, debe precisarse además que la identificación de la
parte demandada y la precisión de su domicilio en etapa de admisibilidad, asegurará que luego del
desarrollo de la fase de debate, concretamente en la etapa de decisión, el juez o tribunal de
garantías, verifique en primera instancia la existencia del acto u omisión denunciados como lesivos
a los derechos de la parte accionante, para luego -en el supuesto de verificar la existencia de dichas
lesiones o afectaciones a derechos fundamentales, de acuerdo a la identificación previamente
realizada de las autoridades demandadas y de acuerdo a los elementos de defensa y medios
probatorios presentados por las partes procesales-, establecer la correspondencia entre estos actos u
omisiones ilegales o indebidas que afecten derechos fundamentales y las personas particulares o
funcionarios públicos que los hubieren realizado u omitido, aspecto que en la fase de decisión,
configura el presupuesto procesal referente a la legitimación pasiva en acciones de amparo
constitucional.

Luego del desarrollo realizado, en este estado de cosas, corresponde señalar que el requisito inserto
en el art. 77.2 de la LTCP y exigible en fase de admisibilidad, en el marco del problema jurídico
plasmado en la presente Sentencia, será abordado de manera específica para el presupuesto de
activación de acciones de amparo constitucional contra servidores públicos, con la finalidad de
desarrollar a través de una interpretación acorde con la Constitución Política del Estado, los
postulados a ser aplicables en caso de cesantía de los mismos identificados como demandados.

Por lo señalado, prima facie, debe establecerse que en mérito a la organización del Estado, el orden
constitucional y el bloque de legalidad imperante, disciplinan para los diferentes órganos públicos,
competencias, atribuciones y potestades públicas que deberán ser ejercidas por los servidores
públicos, por lo que en virtud al ejercicio de estos roles, todos los actos u omisiones lesivas a
derechos por servidores públicos en el ejercicio de sus funciones, no implican afectaciones a
derechos realizadas en ejercicio personal, en consecuencia, la identificación exigida por el art.
77.2 de la LTCP, tiene la finalidad de asegurar el derecho a la defensa y la equidad de la
parte demandada, pero en el caso de servidores públicos, la defensa que debe ser garantizada
para la parte demandada, no es personal, sino como autoridades que responden a una
potestad pública determinada, por tanto, la cesantía de servidores públicos que hayan
originado el acto u omisión indebida, no implicará incumplimiento en etapa de admisibilidad
de la exigencia plasmada en el art. 77.2 de la LTCP cuando no se identifique el nombre de la
nueva autoridad en ejercicio de una determinada función pública, en ese contexto,
interpretando esta disposición bajo un criterio favorable a una efectiva tutela constitucional,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1148
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

debe establecerse que este presupuesto se tendrá por cumplido y por ende asegurado el
derecho a la igualdad procesal y por supuesto a la defensa de la parte demandada, cuando en
la identificación a ser realizada por el accionante, se consigne la identificación del cargo o la
función pública en cuyo ejercicio pudieron cometerse actos violatorios o restrictivos a
derechos fundamentales; asimismo, para cumplir con la teleología del art. 77.2 de la LTCP,
se tendrá por cumplido este presupuesto, cuando además se precise el domicilio asignado
para el ejercicio de dicha función pública.

De la misma forma, cuando se tenga cumplida esta exigencia y luego de la admisión de la acción
de amparo constitucional, los jueces o tribunales de garantías, en base a los requisitos de
identificación antes señalados, deberán asegurar que los actos de comunicación, es decir, las
citaciones o notificaciones, aseguren el derecho a la defensa de la autoridad que ejerza esa función
pública en ejercicio de la cual se afectaron derechos individuales.

Debe precisarse también que los postulados expresados, no constituyen óbice para la atribución
personal de responsabilidad emergente del ejercicio de la función pública, la cual para los
supuestos de vulneraciones a derechos fundamentales en ejercicio de la función pública, emergerá
de una eventual concesión total o parcial de tutela constitucional pedida.

Finalmente, debe señalarse que el Tribunal Constitucional, a partir de la SC 0264/2004-R de 27 de


febrero, establece que para cumplir la exigencia de la legitimación pasiva, la acción debe
interponerse contra la autoridad que “ostente” el cargo en el momento de la activación de la acción
tutelar, en ese orden, la interpretación realizada en este punto, al diferenciar la exigencia contenida
en el art. 77.2 de la LTCP, cuya observancia debe ser verificada en etapa de admisibilidad y su
implicancia para el análisis de la legitimación pasiva en las etapas deliberativas y de decisión, y al
establecer los presupuestos para la exigencia de identificación de la parte demandada, implica una
modulación a la línea jurisprudencial asumida a partir de la SC 0264/2004-R, razonamiento
reiterado de manera uniforme por el otrora Tribunal Constitucional, el cual fue re-interpretado en
sus alcances mediante el presente fallo.

III.3.2. En cuanto a la legitimación pasiva del actual Director Distrital de Educación de Santa
Cruz

Uno de los problemas jurídicos desarrollados en la presente sentencia, es el referente a la exigencia


de individualización de la parte demandada en el supuesto de funcionarios públicos en cesantía, en
ese orden, se estableció que la identificación exigida por el artículo 77.2 de la LTCP, tiene la
finalidad de asegurar el derecho a la defensa y la equidad de la parte demandada, pero en el caso de
servidores públicos, la defensa que debe ser garantizada para la parte demandada, no es personal,
sino como autoridades que responden a una potestad pública determinada, por tanto, la cesantía de
servidores públicos que hayan originado el acto u omisión indebida, no implicará incumplimiento
en etapa de admisibilidad de la exigencia plasmada en el art. 77.2 de la LTCP cuando no se
identifique el nombre de la nueva autoridad en ejercicio de una determinada función pública, en
ese contexto, se estableció en el Fundamento Jurídico III.1.1 que este presupuesto se tendrá por
cumplido y por ende asegurado el derecho a la igualdad procesal y por supuesto a la defensa de la
parte demandada, cuando en la identificación a ser realizada por el accionante, se consigne la
identificación del cargo o la función pública en cuyo ejercicio pudieron cometerse actos violatorios
o restrictivos a derechos fundamentales.

Ahora bien, en el caso concreto, las autoridades demandadas, en el informe presentado ante el
tribunal de garantías, señalan que en aplicación de la Ley Avelino Siñani, fue posesionado un

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1149


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

nuevo Director Distrital el cual no fue identificado ni demandado en la presente acción, aspecto por
el cual, denuncian ausencia de legitimación pasiva.

Tal como se establece en el punto II.11 de la presente sentencia, con la acción de amparo
constitucional, cursa en antecedentes, diligencia de notificación personal al Director Distrital de
Educación III, actuación procesal de fecha 8 de febrero de 2012, suscrita por Miguel Chávez
Montenegro en su calidad de Director Distrital de Educación.

En mérito al razonamiento desarrollado, para el caso de servidores públicos y en mérito a la


constante problemática de la cesantía de estos, se tiene por cumplida la exigencia del art. 77.2 de la
LTCP, cuando se identifique el cargo o la función en ejercicio de la cual se considera que se
ocasionó un acto u omisión lesiva a derechos fundamentales, por tanto, en la especie, al
identificarse como autoridad demandada al Director Distrital de Educación III y al notificarse en el
domicilio donde se ejercen estas funciones, se tiene por cumplido el presupuesto establecido en el
art. 77.2 de la LTCP, razón por la cual, corresponde ingresar al análisis de fondo de la
problemática.

No obstante lo señalado, debe establecerse que el Director Distrital de Educación del Distrito III,
no tuvo intervención alguna en el pronunciamiento de las Resoluciones de los recursos de
revocatoria o del jerárquico, conforme se desarrolló en la ratio decidendi (razón de la decisión) de
la concesión de la presente acción; por lo mismo la acción de amparo es improcedente respecto de
esta autoridad.

De todo lo expuesto, se concluye que el Tribunal de garantías, al conceder la tutela, evaluó de


manera parcial el caso de autos.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud a la autoridad que le


confiere la Constitución Política del estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve:

1º APROBAR en parte la Resolución 07/2012 de 10 de febrero, cursante de fs. 175 vta. a 177 vta.,
pronunciada por la Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de Justicia de Santa Cruz; y, en
consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, respecto al Director Departamental de
Educación de Santa Cruz en cuanto a la vulneración de los derechos del debido proceso, a la
doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior, a la defensa en la fase impugnativa y al
trabajo y una remuneración justa y no así respecto a los derechos a la seguridad social a corto plazo
y a la vida.

2º Anular la Resolución jerárquica 033/2011 de 20 de julio (Conclusión II.6) y, por ende,


disponer la inmediata corrección del procedimiento administrativo disciplinario, a efectos de que
se asegure el derecho a la doble instancia o de recurrir ante un tribunal superior y el derecho a la
defensa en la fase impugnativa.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.


Se hace constar que la Magistrada Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños, primera relatora, es de
voto disidente.

Fdo. Dr. Ruddy José Flores Monterrey- Presidente.


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez-Magistrada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1150
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

VOTO DISIDENTE
Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Magistrada: Dra. Ligia Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00187-2012-01-AAC
Departamento: Santa Cruz
Partes: Sarah Mery Huanca Ticona contra Bartolomé Puma
Velásquez y Daniel Quispe Manchego, Director del
Servicio Departamental de Educación y Director
Distrital III de Santa Cruz.

I. ANTECEDENTES

I.1. Objeto del voto disidente en la forma y puntos diferenciales

Del contenido de la petición de tutela, se establece lo siguiente: que el objeto de la tutela versa
sobre el resguardo de los derechos al debido proceso, a la seguridad jurídica, al trabajo y a la
estabilidad laboral, a la seguridad social y a la vida, contenidos en los arts. 115.II, 49.III y 46.I de
la Constitución Política del Estado; asimismo, la causa de la tutela implica la denuncia de tres
actos lesivos esenciales: 1) La usurpación de competencias del Director Departamental de
Educación, así en el proyecto de manera textual se transcribe la denuncia de la parte accionante con
el siguiente tenor: “que el Director Departamental de Educación, usurpando competencias del
Ministerio de Educación, emitió tanto la Resolución de revocatoria como la jerárquica” (sic); 2) La
carencia de fundamentación de la resolución administrativa sancionadora emitida en contra de la
accionante; y, 3) El incumplimiento de los efectos del silencio administrativo positivo por parte del
Director Distrital de Educación, toda vez que al no haber respondido el Ministerio de Educación,
sería aplicable esta institución jurídica.

II. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

En base a estos antecedentes, se tiene que los puntos diferenciales en relación a la sentencia objeto
de disidencia, son los siguientes aspectos:

II.1. Considerando que una denuncia taxativa realizada por la parte accionante versa sobre el tema
de “usurpación de competencias”, es evidente que éste tópico se encuentra dentro del ámbito de
tutela del Recurso Directo de Nulidad de acuerdo a la SC 0099/2010-R de 10 de mayo; sin
embargo y sin modificar esta línea, en aplicación excepcional del principio pro-actione, para
situaciones en las cuales exista una manifiesta, grosera e irreparable vulneración a derechos
fundamentales, de manera excepcional y aplicando el método de la ponderación, con la
finalidad de asegurar la justicia material, flexibilizando para este efecto presupuestos
procesales, solamente con la finalidad de asegurar la materialización de los valores justicia e
igualdad, es factible tutelar el derecho a la competencia como elemento del debido proceso a
través de la acción de amparo constitucional.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1151


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.2. En el caso de autos, definitivamente existe una manifiesta, grosera e irreparable vulneración al
derecho al debido proceso vinculado con una usurpación de competencias que además incide en la
garantía de la doble instancia, por esta razón, es menester conceder la tutela, pero para ello, con la
finalidad de brindar mayor seguridad al justiciable, antes de analizar la temática del debido
proceso, es importante fundamentar la razón jurídica por la cual esta problemática está siendo
analizada a través de la acción de amparo constitucional, argumentación que necesariamente debe
considerar dos aspectos esenciales la SC 0099/2010-R de 10 de mayo y el desarrollo dogmático del
principio pro-actione.

II.3. La sentencia objeto de referencia, si bien concede la tutela considerando como un elemento
esencial la garantía de la doble instancia; empero, a través de la acción de amparo constitucional,
de manera tácita, tutela la garantía de la competencia -pues este es un aspecto expresamente
denunciado-; este es precisamente el punto diferencial de argumentación, puesto que, considero
relevante la fundamentación que sustente los aspectos constitucionales que sustenten las razones
por las cuales en el caso concreto y sin que este hecho implique modulación o cambio de
entendimiento jurisprudencial, se conceda la tutela a través de la acción de amparo constitucional.

II.4. El análisis directo de la problemática, podría interpretarse como una modulación o


cambio tácito de jurisprudencia, máxime cuando la SC 0099/2010-R de 10 de mayo, fue y
es aplicada de manera uniforme.

En base a estos razonamientos, si bien en relación a la sentencia cuestionada, existe concurrencia


de criterio en cuanto a la concesión de tutela, empero a continuación se desarrollará la
argumentación jurídico-constitucional que sustenta la formulación de la presente disidencia en la
forma.

III.1. La exigencia requerida a la parte accionante, referente a la individualización de la


parte demandada y la problemática de funcionarios públicos en cesantía.

El régimen constitucional vigente a partir del referendo constitucional de 2009, diseña un nuevo
modelo de Estado, cuyo sustento estructural, encuentra razón de ser en el respeto a los derechos
fundamentales insertos en el Bloque de Constitucionalidad, reconocido por el artículo 410 de la
CPE, en ese contexto, este pilar esencial del Estado Plurinacional de Bolivia tiene validez
material con la disciplina constitucional expresa de las acciones de defensa, las cuales
constituyen garantías adjetivas eficaces y oportunas para la defensa de los derechos de las
personas.

En el marco de lo señalado, la acción de amparo constitucional, está configurada como un


verdadero mecanismo idóneo, oportuno y eficaz para la tutela de derechos fundamentales,
cuando su protección no se encuentre dentro del ámbito de aplicación de otros mecanismos de
defensa o cuando pueda ser tutelada por otros mecanismos idóneos de defensa a los derechos
fundamentales.

De acuerdo al postulado precedentemente citado, debe precisarse además que el Estado


Plurinacional de Bolivia, en su diseño y postulados, responde a la ingeniería propia del Sistema
Interamericano de Protección de Derechos Humanos, cuya construcción dogmática e
institucional, fue realizada en el marco de los alcances y preceptos contenidos en la Convención
Americana de Derechos Humanos CADH, en ese orden, este instrumento supranacional inserto
en el Bloque de Constitucionalidad boliviano, en su art. 25.1, establece: “Toda persona tiene
derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1152


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tribunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales
reconocidos por la Constitución, la ley o la presente Convención…”.

A partir de este mandato, se establece que la acción de amparo constitucional disciplinada de


manera específica en los art. 128 y 129 de la CPE, en su diseño constitucional, responde de
manera directa al mandato del art. 25 de la Convención, toda vez que su contenido esencial está
estructurado sobre la base de los principios de sumatoriedad e inmediantez, a partir de los cuales
se consagra la vigencia en este nuevo modelo de Estado, de un mecanismo de tutela pronto y
oportuno, para el resguardo de derechos fundamentales frente a actos u omisiones lesivas a estos
provocadas por servidores públicos o particulares.

En armonía con lo expuesto, debe señalarse que la acción de amparo constitucional, en su


dimensión procesal, es un verdadero proceso de naturaleza constitucional al cual le son
aplicables presupuestos propios de Teoría Procesal General, siempre en el marco de la
naturaleza jurídica de este mecanismo oportuno y pronto de tutela de derechos fundamentales y
de acuerdo a los postulados propios del Derecho Procesal Constitucional, cuyos postulados
procedimentales rigen el ejercicio de la justicia constitucional.

En efecto, precisamente a la luz de la dimensión procesal de la acción de amparo constitucional,


en el marco de presupuestos aportados por la doctrina del Derecho Procesal Constitucional, en el
marco del principio de interpretación “de y conforme a la Constitución” y de acuerdo a pautas
hermenéuticas específicas como ser el criterio exegético y teleológico de interpretación, infra, se
desarrollará una coherente argumentación jurídica que contemple la interpretación del artículo
77.2 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), para los supuestos de
identificación de autoridades demandadas en cesantía.

En el orden de ideas señalado, se tiene que el tenor literal del artículo 77.2 de la LTCP establece
lo siguiente: “La Acción de amparo constitucional será presentada por escrito, con los siguientes
requisitos: 2. Indicar el nombre y domicilio de la parte demandada, o de su representante legal y
el de los terceros interesados”.

Del tenor literal de la norma citada y siguiendo una pauta teleológica de interpretación, se tiene
que el precepto descrito tiene la finalidad de asegurar el derecho a la defensa de la parte
demandada, aspecto que es plenamente coherente con la naturaleza procesal de la acción de
amparo constitucional, toda vez que al ser este mecanismo un verdadero proceso de naturaleza
constitucional, le son aplicables las reglas de un debido proceso, en mérito de las cuales, se debe
asegurar el principio de igualdad procesal expresamente reconocido por el artículo 119 de la
CPE, razón por la cual, el precepto normativo citado, exige al accionante la identificación y la
precisión de su domicilio para, tal como se dijo, asegurar una igualdad procesal.

En coherencia con lo señalado, debe especificarse que la acción de amparo constitucional, en su


dimensión procesal, se divide en cuatro fases específicas: a) La fase de admisibilidad; b) La fase
de debate, es decir del desarrollo de la audiencia pública; c) La fase de la decisión; y, d) La fase
de revisión ante el Tribunal Constitucional Plurinacional.

De acuerdo al objeto y causa de la presente acción y en mérito al problema jurídico planteado en


el caso de autos, es de interés para una coherente argumentación jurídica, armonizar la exigencia
contenida en el art. 77.2 de la LTCP con los postulados procesales insertos en la fase de
admisibilidad de la acción de amparo constitucional, razón por la cual, debe establecerse que la
exigencia de identificación de la parte demandada y la precisión de su domicilio
constituyen una carga procesal para la parte accionante cuya observancia debe ser
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1153
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

verificada por los Jueces y Tribunales de Garantías en la etapa de admisibilidad para


asegurar así el derecho a la igualdad procesal de las partes y su derecho a la defensa, en
este marco, en caso de incumplir la parte accionante con esta carga procesal, los Jueces y
Tribunales de garantías, deberán ordenar su subsanación en plazo judicial razonable y lo
más favorable posible para una tutela constitucional efectiva y un acceso oportuno a la
justicia constitucional.

En el marco de las reglas de un debido proceso, debe precisarse además que la identificación de
la parte demandada y la precisión de su domicilio en etapa de admisibilidad, asegurará que luego
del desarrollo de la fase de debate, concretamente en la etapa de decisión, el Juez o Tribunal de
Garantías, verifique en primera instancia la existencia del acto u omisión denunciados como
lesivos a los derechos de la parte accionante, para luego -en el supuesto de verificar la existencia
de dichas lesiones o afectaciones a derechos fundamentales, de acuerdo a la identificación
previamente realizada de las autoridades demandadas y de acuerdo a los elementos de defensa y
medios probatorios presentados por las partes procesales-, establecer la correspondencia entre
estos actos u omisiones ilegales o indebidas que afecten derechos fundamentales y las personas
particulares o funcionarios públicos que los hubieren realizado u omitido, aspecto que en la fase
de decisión, configura el presupuesto procesal referente a la legitimación pasiva en acciones de
amparo constitucional.

Luego del desarrollo realizado, en este estado de cosas, corresponde señalar que el requisito
inserto en el art. 77.2 de la LTCP y exigible en fase de admisibilidad, en el marco del problema
jurídico plasmado en la presente sentencia, será abordado de manera específica para el
presupuesto de activación de acciones de amparo constitucional contra servidores públicos, con
la finalidad de desarrollar a través de una interpretación acorde con la Constitución, los
postulados a ser aplicables en caso de cesantía de servidores públicos identificados como
demandados.

Por lo señalado, prima facie, debe establecerse que en mérito a la organización del Estado, el
orden constitucional y el bloque de legalidad imperante, disciplinan para los diferentes órganos
públicos, competencias, atribuciones y potestades públicas que deberán ser ejercidas por los
servidores públicos, por lo que en virtud al ejercicio de estos roles, todos los actos u omisiones
lesivas a derechos por servidores públicos en el ejercicio de sus funciones, no implican
afectaciones a derechos realizadas en ejercicio personal, en consecuencia, la identificación
exigida por el art. 77.2 de la LTCP, tiene la finalidad de asegurar el derecho a la defensa y
la equidad de la parte demandada, pero en el caso de servidores públicos, la defensa que
debe ser garantizada para la parte demandada, no es personal, sino como autoridades que
responden a una potestad pública determinada, por tanto, la cesantía de servidores
públicos que hayan originado el acto u omisión indebida, no implicará incumplimiento en
etapa de admisibilidad de la exigencia plasmada en el art. 77.2 de la LTCP cuando no se
identifique el nombre de la nueva autoridad en ejercicio de una determinada función
pública, en ese contexto, interpretando esta disposición bajo un criterio favorable a una
efectiva tutela constitucional, debe establecerse que este presupuesto se tendrá por
cumplido y por ende asegurado el derecho a la igualdad procesal y por supuesto a la
defensa de la parte demandada, cuando en la identificación a ser realizada por el
accionante, se consigne la identificación del cargo o la función pública en cuyo ejercicio
pudieron cometerse actos violatorios o restrictivos a derechos fundamentales, asimismo,
para cumplir con la teleología del art. 77.2 de la LTCP, se tendrá por cumplido este
presupuesto, cuando además se precise el domicilio asignado para el ejercicio de dicha
función pública.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1154


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

De la misma forma, cuando se tenga cumplida esta exigencia y luego de la admisión de la acción
de amparo constitucional, los Jueces o Tribunales de Garantías, en base a los requisitos de
identificación antes señalados, deberán asegurar que los actos de comunicación, es decir las
citaciones o notificaciones, aseguren el derecho a la defensa de la autoridad que ejerza esa
función pública en ejercicio de la cual se afectaron derechos individuales.

Debe precisarse también que los postulados expresados, no constituyen óbice para la atribución
personal de responsabilidad emergente del ejercicio de la función pública, la cual para los
supuestos de vulneraciones a derechos fundamentales en ejercicio de la función pública,
emergerá de una eventual concesión total o parcial de tutela constitucional pedida.

Finalmente, debe señalarse que el Tribunal Constitucional, a partir de la SC 0264/2004-R de 27


de febrero, establece que para cumplir la exigencia de la legitimación pasiva, la acción debe
interponerse contra la autoridad que “ostente” el cargo en el momento de la activación de la
acción tutelar, en ese orden, la interpretación realizada en este punto, al diferenciar la exigencia
contenida en el art. 77.2 de la LTCP cuya observancia debe ser verificada en etapa de
admisibilidad y su implicancia para el análisis de la legitimación pasiva en las etapas
deliberativas y de decisión, y al establecer los presupuestos para la exigencia de identificación
de la parte demandada, implica una modulación a la línea jurisprudencial asumida a partir de la
SC 0264/2044-R de 27 de febrero, razonamiento reiterado de manera uniforme por el otrora
Tribunal Constitucional, el cual fue re-interpretado en sus alcances mediante el presente fallo.

VI.1. Los ámbitos de protección de la acción de amparo constitucional y el Recurso Directo


de Nulidad

Otro problema jurídico esencial a ser desarrollado en la presente sentencia, es el referente a la


diferenciación de ámbitos de protección de la Acción de Amparo Constitucional y del Recurso
Directo de Nulidad, aspecto que será abordado en este punto.

En el marco de lo señalado, debe iniciarse un análisis a partir del diseño del sistema reparador de
control plural de constitucionalidad adoptado por el Estado Plurinacional de Bolivia, el cual
tiene tres componentes esenciales: 1) El control tutelar de constitucionalidad; 2) El control
normativo de constitucionalidad; y, c) El control competencial de constitucionalidad. En ese
orden, el control tutelar de constitucionalidad, tiene la finalidad de resguardar todos los derechos
insertos en el Bloque de Constitucionalidad, por su parte, el control normativo de
constitucionalidad, está diseñado para precautelar el principio de Supremacía de la Constitución
a través de la verificación en cuanto a compatibilidad de contenido de toda norma de carácter
general con el Bloque de Constitucionalidad; finalmente, el control competencial de
constitucionalidad, tiene la finalidad de dirimir a la luz de la Constitución los conflictos de
competencia y además resguardar la garantía de la competencia. En base a las precisiones
desarrolladas, se tiene que la acción de amparo constitucional, específicamente disciplinada por
los artículos 128 y 129 de la Constitución, es un mecanismo inserto dentro del brazo tutelar de
constitucionalidad, cuyo ámbito de protección es la tutela pronta y oportuna de derechos
fundamentales, siempre y cuando estos no tengan un mecanismo específico de defensa de
derechos.

Por su parte, el Recurso Directo de Nulidad, reconocido en el art. 202.12 de la CPE y 157 y
siguientes de la LTCP, dentro del sistema reparador y plural de control de constitucionalidad,
tiene una naturaleza jurídico-constitucional mixta enmarcada tanto dentro del control tutelar
como competencial de constitucionalidad. Este razonamiento encuentra sustento en el objeto de
protección de este mecanismo constitucional de defensa, toda vez que siguiendo el
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1155
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

entendimiento plasmado en la SC 0099/2010-R de 10 de mayo, éste tiene la finalidad de tutelar


un elemento específico del derecho al juez natural que es la garantía de competencia, aspecto
inmerso dentro del radio de control tutelar de constitucionalidad, elemento que además se
encuentra resguardado por el control competencial de constitucionalidad.

Ahora bien, de acuerdo a la ratio decidendi de la SC 0099/2010-R de 10 de mayo, el resguardo a


la competencia, como elemento del derecho al juez natural, debe ser tutelado a través del recurso
directo de nulidad, en ese contexto, del tenor literal del art. 157 en sus dos parágrafos de la
LTCP, debe precisarse los elementos que configuran su contenido esencial, los cuales se
resumen en los siguientes presupuestos: i) La usurpación de competencias por parte de
servidores públicos, a través de un acto o resolución; ii) Los actos de quien ejerza jurisdicción
que no emane de la ley; iii) Los actos de quien ejerza potestades que no emanen de la ley; iv)
Los actos o resoluciones dictadas por autoridad judicial que estuviere suspendida en sus
funciones; y, v) Los actos o resoluciones dictadas por autoridad judicial que estuviere cesante en
sus funciones.

De acuerdo a los presupuestos antes citados, debe establecerse que el Recurso Directo de
Nulidad, protege la garantía de la competencia contra actos o resoluciones concretos,
pronunciados en usurpación de competencias, ejercicio de jurisidicciones o potestades que no
emanen de la ley ó emitidos por autoridad jurisdiccional en cesantía o suspendida. Por su parte,
la acción de amparo constitucional, es un mecanismo tutelar destinado a resguardar y en su caso
restituir derechos fundamentales no tutelados por otros mecanismos de defensa, por cuanto, al
estar la garantía de la competencia resguardada por el recurso directo de nulidad, este
presupuesto del derecho al debido proceso, no se encuentra tutelado por la acción de amparo
constitucional.

V.1. La justicia material y su prevalencia en relación a la justicia formal para casos de


manifiestas vulneraciones a derechos fundamentales.

La reforma constitucional aprobada mediante referendo constitucional de 25 de enero de 2009,


conlleva la vigencia de un modelo de Estado Constitucional de Derecho, así esta característica se
plasma en la cláusula estructural que rige la ingeniería propia del Estado Plurinacional de
Bolivia contemplada en el art. 1 de la CPE. En el marco de lo señalado, una de las características
esenciales del Estado Constitucional de Derecho, es la vigencia plena de los derechos
fundamentales, por tanto, el constituyente encomienda al contralor de constitucionalidad el
mandato expreso de velar por el respeto y la vigencia de los derechos y garantías
constitucionales, así lo establece el artículo 196 de la CPE.

Por lo señalado, se establece que las bases y postulados del Estado Constitucional de Derecho,
constituyen el elemento legitimizador y directriz del ejercicio del control de constitucionalidad,
por esta razón, el último y máximo contralor de constitucionalidad como es el Tribunal
Constitucional Plurinacional, no puede consentir actos que impliquen una manifiesta y grosera
violación a derechos fundamentales, por ser estos contrarios al pilar estructural del Estado
Plurinacional de Bolivia.

En el marco de lo señalado y como consecuencia directa de los postulados propios del Estado
Constitucional de Derecho, el principio pro-actione se configura como una pauta esencial no
solo para la interpretación de derechos fundamentales, sino también como una directriz esencial
para el ejercicio del control de constitucional y la consolidación del mandato inserto en la
cláusula estructural del Estado plasmada en el art. 1 de la CPE; además, esta pauta, asegura el
cumplimiento eficaz de los valores justicia e igualdad material, postulados axiomáticos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1156
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

directrices del nuevo modelo de Estado y reconocidos de manera expresa en el Preámbulo de la


Constitución y en el art. 8.1 también del texto constitucional.

En efecto, el principio pro-actione, asegura que a través de la metodología de la


ponderación, para casos concretos en los cuales exista una manifiesta, irreversible y
grosera vulneración a derechos fundamentales, el contralor de constitucionalidad, en
ejercicio del mandato inserto en el art. 196.1 de la CPE, debe hacer prevalecer la justicia
material a cuyo efecto, su labor hermenéutica de ponderación, generará la flexibilización a
ritualismos extremos para que en casos graves se repare un derecho manifiesta y
groseramente vulnerado, así, el rol del control de constitucionalidad, en virtud del cual, la
justicia formal ceda frente a la justicia material, consolida el fenómeno de constitucionalización
de un régimen constitucional axiomático, en el cual todos los actos de la vida social se
impregnan de contenido no solamente de normas supremas positivas, sino también de valores
supremos y rectores del orden jurídico imperante como ser la justicia e igualdad.

En el orden de ideas expuesto, toda vez que de acuerdo al art. 13.IV de la CPE, los derechos
fundamentales deben ser interpretados de acuerdo al bloque de convencionalidad imperante, es
decir en el marco del contenido de los tratados internacionales referentes a derechos humanos, es
evidente que en virtud a esta pauta, deben aplicarse las pautas de interpretación para derechos
plasmadas en el artículo 29 de la Convención Americana de Derechos Humanos, disposición
que forma parte del Bloque de Constitucionalidad del Estado Plurinacional de Bolivia y que en
su contenido esencial, reconoce la esencia jurídica del principio pro-homine, pauta a partir de la
cual, en el marco de favorabilidad y eficacia máxima de los derechos fundamentales, la teoría
constitucional ha desarrollado el principio pro-actione, el cual está destinado precisamente a
resguardar una vigencia real de los derechos fundamentales, siendo el encargado de este rol el
contralor de constitucionalidad, por ser éste en los estados miembros del Sistema Interamericano
de Protección de Derechos Humanos, el último y máximo garante de los derechos
fundamentales.

La postura antes señalada, ha sido adoptada también por el otrora Tribunal Constitucional, el
cual, en el ejercicio de su rol de control de constitucionalidad, en casos concretos aplicó el
principio pro-actione, haciendo prevalecer con su decisión la justicia material por sobre la
justicia formal en caso de graves lesiones a derechos fundamentales, así, este razonamiento ha
sido expresamente desarrollado por las SSCC 1044/2003-R1138/2004-R, 1294/2006-R, entre
muchas otras. Estos entendimientos, de acuerdo a la argumentación jurídica desarrollada
precedentemente y al ser acordes con el nuevo régimen constitucional, deben ser adoptadas por
el Tribunal Constitucional Plurinacional.

VI.1. La garantía de la competencia y las consecuencias de su afectación en la garantía de


la doble instancia en materia administrativa

Tal como se tiene dicho, en virtud al principio pro-actione, frente a lesiones manifiestas,
irreversibles y groseras a derechos fundamentales, excepcionalmente podrá tutelarse este
elemento del debido proceso a través de la acción de amparo constitucional, en ese orden, debe
señalarse que a partir de la separación de órganos, la función administrativa, debe ser ejercida a
través de competencias, atribuciones y potestades administrativas, las cuales se encuentran
sujetas a un bloque normativo imperante, el cual asegura un ejercicio imparcial y respetuoso de
derechos fundamentales por parte de la función administrativa.

De acuerdo a lo señalado, estas competencias, atribuciones o potestades serán desarrolladas por


servidores públicos a los cuales la normativa imperante les encomiende expresamente dicho
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1157
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

ejercicio, por tanto, el ejercicio de estas por parte de un servidor público al cual la normativa no
le haya encomendado una competencia, atribución o potestad específica, implicará una
usurpación de competencia, aspecto que afecta la garantía de la competencia, resguardada de
manera específica por el art. 120.1 de la CPE.

La premisa antes referida, implica que además la vulneración a la garantía de la competencia,


puede también afectar otros elementos del debido proceso, como ser el derecho a la doble
instancia, el cual, como consecuencia directa de una usurpación de funciones, puede ser
manifiestamente afectado cuando el acto administrativo cuestionado no es objeto de revisión por
una autoridad diferente a la que originó la decisión, por tanto, al estar este presupuesto del
debido proceso específicamente reconocido en el bloque de constitucionalidad, en particular al
estar plasmado en el art. 14.5 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP),
inequívocamente, en caso de afectación, debe ser restituido por el órgano contralor de
constitucional; es decir, por el Tribunal Constitucional Plurinacional; asimismo, todos los otros
derechos que como consecuencia directa de la afectación a la garantía de la competencia por
usurpación de roles sean afectados, deben ser también tutelados por el último y máximo garante
de los derechos fundamentales.

VII.1. Análisis del caso concreto

Luego de haber desarrollado de acuerdo a los postulados de teoría constitucional los problemas
jurídicos planteados en el inicio de la parte argumentativa del presente fallo, a partir de los
mismos, corresponde ahora su aplicación en la presente problemática, tarea que será
desarrollada infra.

VII.1.1. En cuanto a la legitimación pasiva de las autoridades demandadas

Uno de los problemas jurídicos desarrollados en la presente sentencia, es el referente a la


exigencia de individualización de la parte demandada en el supuesto de funcionarios públicos en
cesantía, en ese orden, se estableció que la identificación exigida por el art. 77.2 de la LTCP,
tiene la finalidad de asegurar el derecho a la defensa y la equidad de la parte demandada, pero en
el caso de servidores públicos, la defensa que debe ser garantizada para la parte demandada, no
es personal, sino como autoridades que responden a una potestad pública determinada, por tanto,
la cesantía de servidores públicos que hayan originado el acto u omisión indebida, no implicará
incumplimiento en etapa de admisibilidad de la exigencia plasmada en el art. 77.2 de la LTCP
cuando no se identifique el nombre de la nueva autoridad en ejercicio de una determinada
función pública, en ese contexto, se estableció en el Fundamento Jurídico III.1 de la presente
sentencia que este presupuesto se tendrá por cumplido y por ende asegurado el derecho a la
igualdad procesal y por supuesto a la defensa de la parte demandada, cuando en la identificación
a ser realizada por el accionante, se consigne la identificación del cargo o la función pública en
cuyo ejercicio pudieron cometerse actos violatorios o restrictivos a derechos fundamentales.

Ahora bien, en el caso concreto, las autoridades demandadas, en el informe presentado ante el
Tribunal de Garantías, señalan que en aplicación de la Ley Avelino Siñani, fue posesionado un
nuevo Director Distrital el cual no fue identificado ni demandado en la presente acción, aspecto
por el cual, denuncian ausencia de legitimación pasiva.

Tal como se establece en el punto II.11 de la presente sentencia, con la acción de amparo
constitucional, cursa en antecedentes, diligencia de notificación personal al Director Distrital de
Educación III, actuación procesal de fecha 8 de febrero de 2012, suscrita por Miguel Chávez
Montenegro en su calidad de Director Distrital de Educación.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1158
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En mérito al razonamiento desarrollado en la presente sentencia, para el caso de servidores


públicos y en mérito a la constante problemática de la cesantía de estos, se tiene por cumplida la
exigencia del art. 77.2 de la LTCP, cuando se identifique el cargo o la función en ejercicio de la
cual se considera que se ocasionó un acto u omisión lesiva a derechos fundamentales, por tanto,
en la especie, al identificarse como autoridad demandada al Director Distrital de Educación III y
al notificarse en el domicilio donde se ejercen estas funciones, se tiene por cumplido el
presupuesto establecido en el art. 77.2 de la LTCP, razón por la cual, corresponde ingresar al
análisis de fondo de la problemática.

VII.1.2. En cuanto a la denuncia de usurpación de competencias de las autoridades


demandadas.

Uno de los actos denunciados como lesivos por la accionante es la emisión de la Resolución
033/2011 en flagrante usurpación de funciones de las autoridades demandadas; en ese orden,
debe realizarse las siguientes consideraciones de orden jurídico-constitucional:

Tal como se señaló en el Fundamento Jurídico II.2 de la presente disidencia, el Recurso Directo
de Nulidad, protege la garantía de la competencia contra actos o resoluciones concretos,
pronunciados en usurpación de competencias, premisa a partir de la cual, se establece que la
acción de amparo constitucional, es un mecanismo tutelar destinado a resguardar y en su caso
restituir derechos fundamentales no tutelados por otros medios de defensa, por cuanto, al estar la
garantía de la competencia resguardada por un medio de defensa específico, este presupuesto del
derecho al debido proceso, no se encuentra tutelado por la acción de amparo constitucional,
debiendo en este caso, activarse el Recurso Directo de Nulidad.

Ahora bien, en el Fundamento Jurídico III.3 de esta disidencia, se señalo también que en el
marco de los postulados del Estado Constitucional de Derecho, el principio pro-actione, en casos
de manifiestas, irreversibles y groseras vulneraciones a derechos fundamentales, asegura la
prevalencia de la justicia material en relación a la justicia formal, por tanto, merced a esta pauta
con génesis directa en el art. 29 de la Convención Americana de Derechos Humanos, a través de
la labor de ponderación de derechos, la justicia como valor rector del orden constitucional,
inclina la balanza para la tutela de derechos fundamentales que en caso de no flexibilizarse los
procedimientos establecidos consolidarían un atentando al Estado Constitucional de Derecho,
por ser irreversibles los efectos de la vulneración a derechos.

En el orden de ideas desarrollado, puede colegirse que toda denuncia referente a usurpación de
competencias, debe ser objeto de control de constitucionalidad a través del Recurso Directo de
Nulidad; sin embargo, frente a una grosera, irreversible y manifiesta lesión a la garantía de
competencia, las formalidades o presupuestos procesales para la activación del control de
constitucionalidad, deben flexibilizarse, por cuanto este aspecto de manera excepcional podrá
aperturarse a través de la acción de amparo constitucional para evitar así un grave e irreparable
atentado a la garantía de la competencia y por ende a las reglas del debido proceso.

En mérito a este razonamiento, en la especie, debe determinarse si existe una situación grave e
irreparable, plasmada en una grosera y manifiesta lesión a la garantía de competencia que
justifique la flexibilización excepcional de presupuestos procesales y la tutela de este aspecto a
través de la acción de amparo constitucional, entonces, por lo señalado y de acuerdo a los datos
que informan la presente causa, se tiene que tal como se expone en el punto II.4 del presente
fallo, por Resolución 023/2011 de 27 de mayo de 2011, Bartolomé Puma Velásquez -
autoridad ahora demandada-, en su calidad de Director Departamental de Educación de Santa
Cruz, resuelve ratificar el fallo emitido en contra de la ahora accionante por el Tribunal
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1159
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Disciplinario Administrativo de la Dirección Distrital de Educación III del Departamento


de Santa Cruz. Asimismo, de la compulsa de antecedentes, se evidencia también que con esta
decisión, se notifica a la ahora accionante en fecha 22 de junio de 2011.

Posteriormente, como consecuencia del recurso jerárquico interpuesto por la parte ahora
accionante, mediante Resolución Administrativa 033/2011 de 20 de julio, también suscrita
por Bartolomé Puma Velásquez, en su calidad de Director Departamental de Educación de
Santa Cruz, esta autoridad resuelve “rechazar dicho recurso” (sic) (resaltado y subrayado
nuestro) (fs. 24 a 25).

De la compulsa de estas dos resoluciones, se establece que tanto la Resolución 023/2011 que
resuelve el recurso de revocatoria, como la Resolución Administrativa 033/2011 que resuelve el
recurso jerárquico interpuesto, se encuentran suscritas por Bartolomé Puma Velásquez, en su
calidad de Director Departamental de Educación de Santa Cruz.

En el marco de los antecedentes referidos, debe precisarse que la garantía de competencia como
elemento del juez natural y por ende del debido proceso, en este caso debe ser tutelada de
manera excepcional mediante la presente acción de amparo constitucional, por existir en el caso
de autos una manifiesta, irreparable y grosera usurpación de competencias por parte de
Bartolomé Puma Velásquez. Por lo señalado, se colige que esta manifiesta vulneración a la
garantía de la competencia, por exigencias formales, no puede ser consentida ni menos aún
convalidada en un Estado Constitucional de Derecho, en ese orden, frente a esta grave
vulneración, en aplicación del principio pro-actione, no podría rechazarse la presente causa por
no activarse el mecanismo idóneo de tutela, es decir el Recurso Directo de Nulidad, un
razonamiento contrario, haría irreparable la lesión ocasionada a este presupuesto del debido
proceso.

Por lo señalado, la manifiesta y grosera usurpación de competencias antes señalada, incide


además de manera directa en la afectación del debido proceso en sede administrativa,
concretamente en relación a la garantía de la doble instancia, en virtud de la cual, las personas
tienen el derecho de que las decisiones asumidas a través de un recurso de revocatoria, sean
merced a un recurso jerárquico, revisados por una autoridad diferente a aquella que conoció y
resolvió la revocatoria planteada.

Asimismo, en la especie, la afectación de la garantía de la competencia vulnerada como


consecuencia de una manifiesta usurpación de competencias por parte de Bartolomé Puma
Velásquez, autoridad ahora demandada, al afectar también las reglas del debido proceso en su
elemento referente a la doble instancia, implican también una afectación del principio de
seguridad jurídica, directriz rectora de la función administrativa.

De la misma forma, las afectaciones antes referidas, vulneran también el derecho al trabajo, el
cual, se encuentra expresamente reconocido por el art. 46 de la CPE, en ese orden, se tiene que
en cuanto a este derecho, sin ser excluyentes, de acuerdo al régimen constitucional, conforman
su núcleo esencial dos aspectos esenciales: a) El derecho al trabajo equitativo; y, b) El derecho a
una fuente laboral en condiciones equitativas. En ese orden, el resolver un recurso jerárquico en
una manifiesta usurpación de competencias y confirmar una decisión que afecta directamente en
una fuente de trabajo, confirmando una decisión que en el caso concreto resuelve en primera
instancia y en contra de la accionante el descenso a su fuente de trabajo, implica también una
afectación del derecho a una fuente laboral en condiciones equitativas y al derecho al trabajo
equitativo. Asimismo, la confirmación en manifiesta usurpación de competencias de un ascenso
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1160
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

laboral, implica también afectación al contenido esencial del derecho a la seguridad social, el
cual se encuentra reconocido por el art. 45 de la CPE.

Siguiendo el análisis y considerando que la accionante denuncia además la vulneración al


derecho a la vida, se tiene que en el caso concreto, la afectación del derecho al debido proceso
en su elemento competencia, no tiene incidencia directa en el derecho a la vida de la accionante,
por lo que se concluye que este derecho no fue vulnerado.

VII.1.3. En cuanto a los otros actos denunciados como lesivos a los derechos de la
accionante

Al margen del acto denunciado como lesivo analizado en el punto anterior, la accionante
denuncia también los siguientes actos lesivos: i) La omisión del Director Departamental de
Educación de remitir el recurso jerárquico en el tercer día ante el Ministerio de Educación; ii) La
omisión de requisitos esenciales de notificación a la accionante con la Resolución 033/2011; y,
iii) El incumplimiento a una decisión estimatoria por parte del Ministerio de Educación,
emergente de las consecuencias jurídicas del silencio administrativo positivo.

Ahora bien, considerando que el primer acto será tutelado, por los efectos de la concesión de
tutela que conllevará la nulidad de la Resolución 033/2011, no existe relevancia constitucional
para analizar estos otros actos denunciados como lesivos, razón por la cual, en estos supuestos,
no se ingresará al análisis de la problemática.

VII.1.4. En cuanto al Director Distrital de Educación

Finalmente, debe establecerse que la parte accionante, activa el control tutelar de


constitucionalidad en contra del Director Distrital de Educación del Distrito III, en ese orden, de
la compulsa de antecedentes se tiene que en cuanto al primer acto denunciado como lesivo y el
cual será tutelado mediante la presente acción, no existe intervención de esta autoridad en la
suscripción de las resoluciones cuestionadas, por tanto, no puede concederse la tutela en relación
a esta parte demandada.

De todo lo expuesto, se concluye que el Tribunal de garantías, al conceder en su totalidad la


acción de amparo, evaluó de manera parcial el caso de autos.

En base a la Fundamentación Jurídica precedente, la suscrita Magistrada considera que el


Tribunal Constitucional Plurinacional, en la parte dispositiva del fallo debió establecer lo
siguiente:

1º APROBAR parcialmente el Auto 07/2012 de 10 de febrero, pronunciada por la Sala Civil


Primera del Tribunal Departamental de Justicia del Distrito Judicial de Santa Cruz; y en
consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada en cuanto a la denuncia de usurpación de
competencias y afectación al debido proceso, a la seguridad jurídica, al trabajo y a la seguridad
social y no así en relación al derecho a la vida.

2º Disponer la inmediata corrección de procedimiento administrativo asegurando el derecho a la


doble instancia.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños-Magistrada


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1161
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0143/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00356-2012-01-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 24/2012 de 28 de febrero, cursante de fs. 71 a 74 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Guadalupe Aurora Alcón
Tancara en representación de Lilian Yohana Pérez Alcón contra Julio Abdón Condarco
Flores, Presidente, Juan Carlos Vaca Castedo y Gonzalo Portugal Aguirre, miembros de la
Comisión de Régimen Disciplinario, José Antonio Piérola Gutiérrez, Vicerrector de la
Universidad Policial Mariscal Antonio José de Sucre; todos, de la Academia Nacional de
Policías (ANAPOL) de la Policía Boliviana Nacional.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Mediante memoriales presentados el 3 y 15 de febrero de 2012, cursantes de fs. 43 a 46 vta. y 52


a 54 vta., respectivamente, la accionante en representación de su hija, señala que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

a) Antecedentes fácticos

A raíz de una denuncia verbal, efectuada por un Oficial de la Policía Boliviana Nacional, el 18
de mayo de 2011, mediante Auto inicial de proceso sumario, la Comisión de Régimen
Disciplinario de la ANAPOL, inició un proceso disciplinario en contra de su hija Lilian Yohana
Pérez Alcón, por “supuestamente haber afirmado una falsedad y por haber contraído
matrimonio” (sic), en el periodo que era dama cadete de ésta Academia.

Indica que, durante la sustanciación del citado proceso disciplinario, fue adjuntada al expediente
administrativo, documentación contradictoria relacionada con el estado civil de la representada,
en razón a que cursan dos certificados emitidos por el Órgano Electoral Plurinacional, en los
cuáles se establece por un lado el “estado de soltería” y por el otro, su estado civil de casada.

Refiere que, no se pudo demostrar la validez de ninguno de los certificados emitidos por el
Órgano Electoral Plurinacional; por otra parte, sin que se haya sustanciado proceso alguno para
demostrar la calidad del documento aparejado al expediente administrativo, y en base
únicamente a uno de los certificados y a la declaración del Oficial de Policía que hizo la
denuncia, respecto a que la citada estuvo casada con un sobrino suyo, se le sancionó con la baja
definitiva de la Policía Nacional Boliviana, sin derecho a reincorporación.

b) Actos denunciados como lesivos


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1162
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El 7 de julio de 2011, la ahora representada, interpuso excepción de prescripción, entendiendo


que la falta atribuida hubiese prescrito, toda vez que, de acuerdo a lo establecido por el art. 74
del Reglamento del Régimen Disciplinario de las Unidades Académicas de Grado de la
UNIPOL, las faltas cometidas por los estudiantes durante su permanencia en la academia,
prescriben a los doce meses de cometida la misma.

En otro orden, el proceso sumario no fue llevado conforme el procedimiento establecido, en


razón a que el art. 53 del Reglamento antes mencionado no fue cumplido, puesto que la etapa de
investigación, duró más de los diez días hábiles determinados.

La investigación giró en base a supuestos y no, sobre prueba fehaciente, por la cual la Comisión
de Régimen Disciplinario, denegó la consideración de fondo de la excepción de prescripción que
inicialmente fue diferida para su análisis y pronunciamiento en el fallo, hecho que no se produjo,
toda vez que mereció una respuesta poco fundamentada.

La Resolución Administrativa (RA) 004/2011 de 30 de junio de 2011 y la Resolución de recurso


jerárquico 269/2011 de 30 de septiembre, hacen una simple descripción de hechos y carecen de
fundamentación y análisis respecto a los defectos “de fondo” (sic).

En el memorial de subsanación, también fue vulnerado el derecho de petición, ya que no obtuvo


respuesta respecto al plazo incumplido en la etapa de investigación, tampoco en lo relacionado a
la prescripción planteada.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

La accionante, alega la vulneración de los derechos de su representada, a la petición, al debido


proceso y a la defensa, citando al efecto los arts. 24, 115 y 117.I de la Constitución Política del
Estado (CPE).
I.1.3. Petitorio

Solicita se admita la acción de amparo constitucional, declarando su procedencia, y en


consecuencia, se ordene a la Comisión de Régimen Disciplinario de la Academia Nacional de
Policías, resuelvan conforme a procedimiento la excepción de prescripción planteada,
motivando su decisión con plena valoración de las pruebas aportadas.
I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 28 de febrero de 2012, encontrándose presentes las partes


accionante y demandada, ausente el representante del Ministerio Público, conforme consta en
acta de fs. 66 a 70 vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

La accionante ratificó plenamente el contenido de su acción, explicando los presupuestos


fácticos y el petitorio, citando las mismas normas supuestamente vulneradas y aclarando que el
proceso disciplinario fue iniciado con el argumento que la ahora representada se encontraba
casada, figura que se halla reglada como una causal de retiro de la academia, pero no así como
una falta grave previamente tipificada, razón por la cual la acusación fue ampliada respecto a
que hubiese presentado documentación falsa.

I.2.2. Informe de las personas demandadas

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1163


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En audiencia, el representante de la parte demandada, manifestó: a) El memorial de acción de


amparo constitucional cuya corrección fue ordenada por el Tribunal de garantías, adolece de
precisión y es muy genérico; b) La Resolución “4908” (sic) y el art. 49 del “reglamento de
Disciplina y sanciones”(sic), prohíben el tener matrimonio o haberlo contraído dentro de la
academia; c) Respecto a la prescripción invocada por la demandante, la misma fue respondida,
“con un decreto que debe estar a la resolución final”(sic); d) Del análisis de la certificación
emitida por el Órgano Electoral Plurinacional “en virtud del art. 75 faltas continuas (…)” (sic),
el plazo de prescripción se empieza a computar desde el día del cese de los efectos de las faltas
cometidas, hecho que no se produjo en autos, al tratarse de una falta que subsiste en el tiempo;
e) Ni el recurso jerárquico ni la excepción de prescripción fueron planteados ante el Rectorado
de la Universidad Policial, que era la instancia competente, concluyéndose por tanto como no
agotada la fase de impugnación en sede administrativa; y, f) Se ha dado respuesta a la excepción
de prescripción planteada mediante la contestación oportuna efectuada en la RA “04/11, que la
recurrente lo ha avanzado como un elemento de segunda instancia” (sic).

I.2.3. Intervención de la Procuraduría General del Estado

Mediante memorial de 28 de febrero de 2012, cursante de fs. 62 a 64, el Procurador General del
Estado, manifestó que la entidad que dirige se abstiene de intervenir en la presente acción
constitucional, basando legalmente su posición en los arts. 229 de la CPE; 8.3 de la Ley de la
Procuraduría General del Estado (LPGE); 6 del Decreto Supremo (DS) 788 de 5 de febrero de
2011; y, 57 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), señalando que su
participación “debe entenderse sólo en casos de conexitud”(sic), limitándose a los asuntos en los
que el Tribunal Constitucional Plurinacional, convoque a la Procuraduría General del Estado a
audiencia y “cuando se trate de la defensa de los intereses del Estado” (sic).

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, mediante Resolución
24/2012 de 28 de febrero, cursante de fs. 71 a 74 vta., concedió la tutela ordenando anular y
dejar sin efecto la RA 004/11, debiendo emitirse una nueva bajo los lineamientos expuestos en
la resolución; en base a los siguientes argumentos de orden legal: 1) Son cuatro los elementos
que activan los mecanismos de investigación, siendo en el presente caso, un informe del Oficial
asignado a dicho efecto, documento que luego fue base de la Resolución 004/11, investigación y
proceso disciplinario dentro de los cuales no fueron agotadas todas las instancias de
averiguación de lo ocurrido, considerando únicamente la declaración informativa del
denunciante, omitiendo por ejemplo la citación al supuesto cónyuge de la ahora representada; 2)
Es un deber constitucional de la parte acusadora cargar con la producción de prueba; 3) Según
informe del encargado de kardex de la Policía Boliviana Nacional, no se encuentra partida
matrimonial a nombre de Lilian Yohana Pérez Alcón; 4) En la Resolución 004/11, la “comisión
del régimen disciplinario” (sic), se basó únicamente en el informe en conclusiones y no fue
realizada una adecuada valoración de la prueba, en especial de los dos certificados emitidos por
el Órgano Electoral Plurinacional, respecto al estado civil de la representada, no existiendo en
archivos de la entidad policial, informe concluyente al respecto, sin que se haya considerado la
duda razonable al caso; y, 5) Queda también evidenciada la falta de motivación en la RA
004/11, sobre la prescripción planteada, efectuándose únicamente una transcripción de
normativa, sin llegar a una “interpretación concreta, amplia y motivada” (sic), afectando
consecuentemente el debido proceso.

En vía de complementación y enmienda, el Tribunal de garantías señaló: Como efecto de la


anulación de la RA 004/11, se anula también la Resolución de Recurso Jerárquico 269/2011, que
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1164
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

confirma la Resolución de primera instancia; y, por tanto, determina la restitución de la ahora


representada a la ANAPOL.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las siguientes
conclusiones:

II.1. En virtud del informe 004/2011 de 4 de mayo, emitido por el Jefe del Departamento de
Instrucción de la ANAPOL, se dio inicio a la investigación relacionada con el supuesto estado
civil de la dama cadete Lilian Yohana Pérez Alcón, entendiendo que su conducta vulneraba el
régimen disciplinario imperante en la ANAPOL (fs. 4).

II.2. Mediante Auto inicial de proceso sumario interno de 18 de mayo de 2011, la Comisión de
Régimen Disciplinario de la Academia Nacional de Policías, inició proceso sumario interno
contra la ahora representada, por la presunta infracción del “Art. 39 (Faltas Graves), Inciso B.2.
Numeral 4)” (sic) referido a afirmar una falsedad, e “Inciso B.3. Numeral 11) contraer
matrimonio”(sic), ambas normas del Reglamento del Régimen Disciplinario de las Unidades
Académicas de Grado de la UNIPOL (fs. 3).

II.3. El 3 de junio de 2011, Guido Germán Aranda Márquez, prestó su declaración informativa
mediante la cual afirmó que tiene conocimiento respecto a que su sobrino, Diego Loayza Aranda
se encontraría casado con la ahora representada, agregando no contar con prueba documental
alguna que pruebe su testificación (fs. 7 a 8).

II.4. El 7 de junio de 2011, Lilian Yohana Pérez Alcón, dentro del proceso sumario iniciado en
su contra, interpuso memorial de excepción previa de prescripción, al amparo del art. 74 inc. b)
del Reglamento arriba señalado, solicitando el archivo de obrados (fs. 10 a11).

II.5. El 15 de junio de 2011, la Comisión de Régimen Disciplinario de la Academia Nacional de


Policías notificó a la representada con el Auto de la misma fecha, en el cuál le comunicaron que
la excepción de prescripción planteada “será considerada al momento de emitir resolución” (sic)
(fs. 12).

II.6. Mediante Informe 0015/2011 de 9 de junio, el Encargado de Archivo y Kardex de la


Academia Nacional de Policías, concluye que cursa en archivos institucionales la certificación
1572/2008 de 11 de noviembre, en la que se señala que no se encontró partida de matrimonio a
nombre de Lilian Yohana Pérez Alcón y que no registra antecedentes policiales, civiles ni
penales a tiempo de ser admitida como postulante a dama cadete (fs. 14).

II.7. Por RA 004/11, se determinó la baja definitiva sin derecho a reincorporación de la ahora
representada por “existir suficientes elementos, que generan en la Comisión de Régimen
Disciplinario, la convicción de que ha infringido el art. 39 inc. B.3. del Reglamento arriba
citado, que a la letra dice: “Serán sancionados con BAJA definitiva de la Unidad Académica de
Grado y determinados por la CRD mediante Proceso Sumario Interno: 'Contraer matrimonio'”.
Concordante con el art. 19 inciso f) del Estatuto Orgánico del Sistema Educativo Policial (sic)
(fs. 24 a fs. 25).

II.8. El 4 de julio de 2011, Lilian Yohana Pérez Alcón, presentó Recurso Jerárquico (fs. 27 a 28
vta.) contra la RA 004/11 de 30 de junio de 2011, mereciendo por respuesta la Resolución de

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1165


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

recurso jerárquico 269/2011, notificada a la hija de la hoy accionante el 28 de octubre de la


misma gestión, en la cual se confirmó en todas sus partes la RA 004/11 (fs. 33 a 38 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La accionante considera vulnerados los derechos de su representada de petición, debido proceso


y defensa, por cuanto entiende que ésta, fue injustamente dada de baja sin derecho a
reincorporación de la ANAPOL, en virtud de un proceso disciplinario seguido en su contra,
dentro del cual expresa que ocurrió lo siguiente: i) Durante el periodo de investigación y la
sustanciación del proceso propiamente dicho, se vulneró el derecho al debido proceso de manera
flagrante, por cuanto las resoluciones emitidas, tanto de primera instancia, como recurso
jerárquico, no cuentan con la motivación suficiente respecto a la excepción de prescripción
planteada y menos aún, contienen una adecuada valoración de las pruebas, derivando en los
injustos fallos señalados; y, ii) Se lesionó el derecho de petición, ya que no se obtuvo respuesta
fundamentada respecto al plazo incumplido que se encontraba establecido para el periodo
correspondiente a la etapa de investigación, con el añadido que no se respondió el tema
relacionado a la prescripción planteada. En consecuencia, se procederá a analizar en revisión si
en el presente caso corresponde la concesión o no, de la tutela solicitada.

III.1. La acción de amparo constitucional. Su configuración constitucional.

El orden constitucional boliviano, dentro de las acciones de defensa, instituye en el art.128 la


acción de amparo constitucional como un mecanismo de defensa, que tendrá lugar contra los
“…actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o
colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos
por la Constitución y la ley”.

Del contenido del texto constitucional de referencia, puede inferirse que la acción de amparo
constitucional es un mecanismo de defensa jurisdiccional, eficaz, rápido e inmediato de
protección de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, cuyo ámbito de
protección se circunscribe respecto de aquellos derechos fundamentales y garantías que no se
encuentran resguardados por los otros mecanismos de protección especializada que el mismo
orden constitucional brinda a los bolivianos, como la acción de libertad, de protección de
privacidad, popular, de cumplimiento, etc. Asimismo, desde el ámbito de los actos contra los
que procede, esta acción se dirige contra aquellos actos y omisiones ilegales o indebidos
provenientes no sólo de los servidores públicos sino también de las personas individuales o
colectivas que restrinjan o amenacen restringir los derechos y garantías objeto de su protección.

En este contexto, el amparo constitucional boliviano en su dimensión procesal, se encuentra


concebido como una acción que otorga a la persona la facultad de activar la justicia
constitucional en defensa de sus derechos fundamentales y garantías constitucionales, frente a
los actos u omisiones ilegales provenientes de los servidores públicos o particulares.

“El término de acción no debe ser entendido como un simple cambio de nomenclatura, que no
incide en su naturaleza jurídica, pues se trata de una verdadera acción de defensa inmediata,
oportuna y eficaz para la reparación y restablecimiento de los derechos y garantías
fundamentales, y dada su configuración, el amparo constitucional se constituye en un proceso
constitucional, de carácter autónomo e independiente con partes procesales diferentes a las del
proceso ordinario o por lo menos con una postura procesal distinta, con un objeto específico y
diferente, cual es la protección y restitución de derechos fundamentales con una causa distinta
a la proveniente del proceso ordinario, esto es, la vulneración concreta o inminente de derechos
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1166
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fundamentales a raíz de actos y omisiones ilegales o indebidos con un régimen jurídico procesal
propio.

En este orden de ideas, la acción de amparo constitucional adquiere las características de


sumariedad e inmediatez en la protección, por ser un procedimiento rápido, sencillo y sin
ritualismos dilatorios. A estas características se añade la de generalidad, a través de la cual la
acción puede ser presentada sin excepción contra todo servidor público o persona individual o
colectiva.

Finalmente cabe señalar, que dentro de los principios procesales configuradores del amparo
constitucional, el constituyente resalta la inmediatez y subsidiariedad al señalar en el parágrafo
I del art. 129 de la CPE, que esta acción "(…) se interpondrá siempre que no exista otro medio
o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados".

Lo señalado implica que la acción de amparo forma parte del control reforzado de
constitucionalidad o control tutelar de los derechos y garantías, al constituirse en un
mecanismo constitucional inmediato de carácter preventivo y reparador destinado a lograr la
vigencia y respeto de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, siempre que no
exista otro medio de protección o cuando las vías idóneas pertinentes una vez agotadas no han
restablecido el derecho lesionado, lo que significa que de no cumplirse con este requisito, no se
puede analizar el fondo del problema planteado y, por tanto, tampoco otorgar la tutela (SC
0002/2012 de 13 de marzo).

III.2. Contenido esencial del debido proceso y el derecho a la defensa en la Constitución


Política del Estado

III.2.1. Jurisprudencia relacionada con el debido proceso, el derecho a la defensa y la


motivación de las resoluciones en sede administrativa

El Tribunal Constitucional, en la SC 1289/2010-R de 13 de septiembre, señaló que: "La


jurisprudencia del Tribunal Constitucional, contenida en la SC 0752/2002-R de 25 de junio,
recogiendo lo señalado en la SC 1369/2001-R de 19 de diciembre, ha establecido que el
derecho al debido proceso '…exige que toda Resolución sea debidamente fundamentada. Es
decir, que cada autoridad que dicte una Resolución debe imprescindiblemente exponer los
hechos, realizar la fundamentación legal y citar las normas que sustenta la parte dispositiva
de la misma. Que, consecuentemente cuando un Juez omite la motivación de una Resolución, no
sólo suprime una parte estructural de la misma, sino también en los hechos toma una decisión
de hecho no de derecho que vulnera de manera flagrante el citado derecho que permite a las
partes conocer cuáles son las razones para que se declare en tal o cual sentido; o lo que es lo
mismo cuál es la ratio decidendi que llevó al Juez a tomar la decisión'.

En el mismo sentido, la SC 0577/2004-R de 15 de abril, respecto a las resoluciones de los


tribunales de alzada, ha establecido que la '…exigencia de fundamentar las decisiones, se
torna aún más relevante cuando el Juez o Tribunal debe resolver en apelación la
impugnación de las resoluciones pronunciadas por las autoridades de primera instancia (…),
es imprescindible que dichas Resoluciones sean suficientemente motivadas y expongan con
claridad las razones y fundamentos legales que las sustentan y que permitan concluir, que la
determinación sobre la existencia o inexistencia del agravio sufrido fue el resultado de una
correcta y objetiva valoración de las pruebas, del mismo modo que se exige al apelante cumplir
con la obligación de fundamentar los agravios; por cuanto, en la medida en que las
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1167
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

resoluciones contengan, los fundamentos de hecho y de derecho, el demandado tendrá la


certeza de que la decisión adoptada es justa; por lo que no le esta permito a un Juez o Tribunal,
reemplazar la fundamentación por la relación de antecedentes, la mención de los
requerimientos de las partes o hacer alusión de que el Juez de instancia obró conforme a
derecho, (…); con mayor razón, si se tiene en cuenta que el contar con una Resolución
debidamente fundamentada y motivada es un derecho fundamental de la persona y forma parte
del debido proceso …'” (las negrillas nos corresponden).

Por su parte, la SC 1326/2010-R de 20 de septiembre, ha dispuesto: “La jurisprudencia


constitucional ha establecido, que la garantía del debido proceso comprende entre uno de sus
elementos la exigencia de la motivación de las resoluciones, lo que significa, que toda autoridad
que conozca de un reclamo, solicitud o que dicte una resolución resolviendo una situación
jurídica, debe ineludiblemente exponer los motivos que sustentan su decisión, para lo cual,
también es necesario que exponga los hechos establecidos, si la problemática lo exige, de
manera que el justiciable al momento de conocer la decisión del juzgador lea y comprenda la
misma, pues la estructura de una resolución tanto en el fondo como en la forma, dejará pleno
convencimiento a las partes de que se ha actuado no sólo de acuerdo a las normas sustantivas y
procesales aplicables al caso, sino que también la decisión está regida por los principios y
valores supremos rectores que rigen al juzgador, eliminándose cualquier interés y parcialidad,
dando al administrado el pleno convencimiento de que no había otra forma de resolver los
hechos juzgados sino de la forma en que se decidió.

La motivación no implicará la exposición ampulosa de consideraciones y citas legales, sino


que exige una estructura de forma y de fondo. En cuanto a esta segunda, la motivación puede
ser concisa, pero clara y satisfacer todos los puntos demandados, debiendo expresar el juez
sus convicciones determinativas que justifiquen razonablemente su decisión en cuyo caso las
normas del debido proceso se tendrán por fielmente cumplidas” (las negrillas nos pertenecen).

Respecto a la falta de motivación de las resoluciones inherentes a procesos disciplinarios en el


seno de la Policía Nacional de Bolivia, el Tribunal Constitucional mediante la SC 0871/2010-R
de 10 de agosto, ha determinado que: ”Es imperante además precisar que toda resolución ya
sea jurisdiccional o administrativa, con la finalidad de garantizar el derecho a la motivación
como elemento configurativo del debido proceso debe contener los siguientes aspectos a
saber: a) Debe determinar con claridad los hechos atribuidos a las partes procesales, b) Debe
contener una exposición clara de los aspectos fácticos pertinentes, c) Debe describir de
manera expresa los supuestos de hecho contenidos en la norma jurídica aplicable al caso
concreto, d) Debe describir de forma individualizada todos los medios de prueba aportados
por las partes procesales, e) Debe valorar de manera concreta y explícita todos y cada uno de
los medios probatorios producidos, asignándoles un valor probatorio específico a cada uno de
ellos de forma motivada, f) Debe determinar el nexo de causalidad entre las denuncias o
pretensiones de las partes procesales, el supuesto de hecho inserto en la norma aplicable, la
valoración de las pruebas aportadas y la sanción o consecuencia jurídica emergente de la
determinación del nexo de causalidad antes señalado”(las negrillas son nuestras).

III.2.2. El debido proceso y el derecho a la defensa en la Constitución Política del Estado y


su aplicación al ámbito administrativo

La Constitución Política de Estado, define los valores de sociedad en su art. 8, disponiendo que
el Estado Plurinacional de Bolivia se sustenta entre otros, en el valor de la justicia social, para
vivir bien; consecuentemente, la administración de justicia se fundamenta en los principios
procesales de gratuidad, publicidad, transparencia, oralidad, celeridad, probidad, honestidad,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1168
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

legalidad, eficacia, eficiencia, accesibilidad, inmediatez, verdad material, debido proceso e


igualdad de partes ante el juez.

El art.115.II de la CPE, señala: “El Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la


defensa y a una justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones”. El art.
117.I, por su parte establece: “Ninguna persona puede ser condenada sin haber sido oída y
juzgada previamente en un debido proceso (…)”.

El art. 7 de la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH), adoptada y proclamada


por la Asamblea General, en su Resolución 217 A (III) de 10 de diciembre de 1948, dispone:
“Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley”.

La Corte Interamericana de Derechos Humanos, ha señalado que las garantías del debido
proceso, no sólo son exigibles a nivel judicial, sino también deben ser de obligatorio
cumplimiento por cualquier autoridad que ejerza funciones de carácter materialmente
jurisdiccional. En este sentido:"De conformidad con la separación de los poderes públicos que
existe en el Estado de Derecho, si bien la función jurisdiccional compete eminentemente al
Poder Judicial, otros órganos o autoridades públicas pueden ejercer funciones del mismo tipo
(...). Es decir, que cuando la Convención se refiere al derecho de toda persona a ser oída por un
"juez o tribunal competente" para la "determinación de sus derechos", esta expresión se refiere a
cualquier autoridad pública, sea administrativa, legislativa o judicial, que a través de sus
resoluciones determine derechos y obligaciones de las personas. Por la razón mencionada, esta
Corte considera que cualquier órgano del Estado que ejerza funciones de carácter materialmente
jurisdiccional, tiene la obligación de adoptar resoluciones apegadas a las garantías del debido
proceso legal en los términos del artículo 8 de la Convención Americana".

El debido proceso es una garantía constitucional, que en virtud de los efectos de irradiación de la
Constitución Política del Estado, es también aplicable a los procesos administrativos y a todos
aquellos procesos disciplinarios de carácter sancionatorio que se presentan en todas las esferas
institucionales, sean éstas públicas o privadas, dentro las cuáles se tenga que llegar a un fallo o
resolución, decisión que en definitiva surte efectos jurídicos que indudablemente repercuten en
los derechos de las personas.

Ticona Póstigo, señala: “El debido proceso legal, proceso justo o simplemente debido proceso
(así como el derecho de acción, de contradicción) es un derecho humano fundamental que tiene
toda persona y que le faculta a exigir del Estado un juzgamiento imparcial y justo, ante un juez
responsable, competente e independiente, pues, él "Estado no sólo está obligado a proveer la
prestación jurisdiccional (cuando se ejercitan los derechos de acción y contradicción) sino a
proveerla bajo determinadas garantías mínimas que le aseguren tal juzgamiento imparcial y
justo". A criterio del tratadista Saenz, “el Debido Proceso en su dimensión adjetiva, se refiere a
toda aquella estructura de principios y derechos que corresponden a las partes durante la secuela
de todo tipo de proceso, sea este jurisdiccional, sea administrativo, o sea corporativo particular”.

El proceso administrativo sancionatorio al igual que el procedimiento penal, debe hallarse


impregnado de todos los elementos del debido proceso, que deben ser respetados en su
contenido esencial, en cuanto: a) al juez natural, b) legalidad formal, c) tipicidad, d) equidad, y,
e) defensa irrestricta. Eduardo García Enterría, en relación al proceso administrativo
sancionador, ha señalado: “…La doctrina en materia de derecho sancionador administrativo es
uniforme al señalar que éste no tiene una esencia diferente a la del derecho penal general y por
ello se ha podido afirmar que las sanciones administrativas se distinguen de las sanciones

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1169


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

penales por un dato formal, que es la autoridad que las impone, es decir sanciones
administrativas, la administración y sanciones penales, los tribunales en materia penal”.

El proceso administrativo, reconoce el actuar procesal de las partes, que son las personas
físicas o morales que intervienen en el proceso propiamente dicho y sobre las cuales gravitan
las consecuencias de todos los aspectos del mismo, desde el inicio hasta la conclusión
definitiva; en resumen, las partes de un proceso administrativo son: el Órgano Colegiado o
autoridad investida con la facultad de sancionar o dicho de otra manera, el Juez Natural de
«orden administrativo» y el servidor público, que actúa a nombre del Estado, contra el cual se
sustanciará determinada acción disciplinaria” (SC 1448/2011-R de 10 de octubre).

La tipicidad en los procesos administrativos sancionatorios, es parte indisoluble del debido


proceso, que a su vez es común al ejercicio del ius puniendi estatal, que exige que la norma
mediante la cual se establece una sanción, dando lugar al nullun crimen, nulla poena sine lege,
evitando la indeterminación que da lugar a la arbitrariedad. Existe una aplicación general y
transversal de la legalidad como integrante del debido proceso, de cual se deriva el principio de
tipicidad (SC 0498/2011-R de 25 de abril).

Ahora bien, ingresando en los aspectos doctrinales relacionados al caso de autos, cabe
señalar que uno de los elementos esenciales del debido proceso, es la motivación de las
resoluciones, entendida ésta como un derecho fundamental de todos los justiciables y
administrados constituyéndose en una de las garantías que forma parte del contenido
adjetivo del ya referido “debido proceso”; siendo también un presupuesto fundamental del
correcto ejercicio a la tutela judicial efectiva.

A su vez, el derecho a la defensa irrestricta, componente del debido proceso, se halla inserto en
el art. 115.II de la CPE, cuando: “El Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la
defensa (…)”. El derecho a la defensa irrestricta, es un elemento integrante transversal a todas
las fases sustantivas del proceso penal o disciplinario. Al respecto, Binder afirma: “El Derecho a
la Defensa cumple dentro del Proceso Penal, un papel particular, por una parte actúa en forma
conjunta con las demás garantías; por la otra, es la garantía que torna operativas a todas las
demás”.

El derecho a la defensa irrestricta, es uno de los mínimos procesales que debe concurrir dentro
de un proceso sancionatorio en el que se encuentre presente el debido proceso, constituyendo de
esta manera un bloque de garantías procesales dentro del procedimiento sancionador, siempre en
procura de efectivizar un proceso justo.

III.2.3. La motivación de las resoluciones como elemento procesal adjetivo del debido
proceso y el deber de pronunciarse respecto a la totalidad de las cuestiones reclamadas por
los procesados

El respeto absoluto por el debido proceso, es materia de eminente orden público y de los
derechos que se encuentran vinculados al mismo. La motivación de las resoluciones
administrativas, entendida como garantía del debido proceso, tiene que ser comprensible,
puntual, concreta y en todos los casos lógica, incluyendo el análisis de todos los aspectos
relacionados al asunto principal y de aquellos otros derivados del eje central en cuestión,
debiendo en todos los casos efectuarse una relación de causalidad estrecha entre los hechos y la
normativa inherente al caso específico.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1170


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En ningún caso se puede entender que existe motivación por la sola aplicación mecánica del
derecho. La motivación debe compulsar las pruebas y arribar a conclusiones jurídicas
ciertas sobre la base de hechos probados. Cualquier autoridad administrativa que emita una
resolución, debe imprescindiblemente exponer los hechos, realizar una minuciosa
fundamentación legal y citar las normas que sustentan la parte dispositiva de la misma, lo
contrario significa que cuando ésta autoridad disciplinaria omite realizar una correcta
motivación, elimina la parte estructural de la resolución, asumiendo una decisión de hecho y no
de derecho, lesionando efectivamente el debido proceso, derivando en el extremo inaceptable
que los procesados no puedan conocer cuáles son las razones del fallo.

El tratadista Agustín Gordillo, al referirse a los caracteres y requisitos que deben reunir las
decisiones administrativas, ha expresado: “(…) no pueden desconocerse las pruebas existentes
ni los hechos objetivamente ciertos (…). El acto debe resolver todas las peticiones formuladas
(…) o sea, todas las cuestiones planteadas. En esto todas las legislaciones y la doctrina son
uniformes”. Esta ineludible exigencia de fundamentar las decisiones, se torna aún más relevante
cuando la autoridad administrativa o tribunal de alzada deba resolver la impugnación de las
resoluciones pronunciadas por las autoridades de primera instancia; más aún, si se trata de
aspectos relacionados con excepciones interpuestas, que en todos los casos, su resolución tiene
carácter definitivo causando efectos permanentes, razón por la cual, se reitera que resulta
imprescindible que dichas resoluciones sean suficientemente motivadas y expongan con claridad
las razones y fundamentos legales que las sustentan, permitiendo concluir, que la determinación
asumida sobre la existencia o inexistencia de la falta administrativa, fue el resultado de una
correcta y objetiva valoración de las pruebas, de la misma manera que se exige del administrado
apelante, cumplir con la obligación de fundamentar los agravios supuestamente sufridos.

“No basta la simple cita de preceptos legales en una resolución para considerar motivada ésta,
sino que es preciso que se expongan las argumentaciones pertinentes que conduzcan a establecer
la decisión correspondiente”.

En tanto y en cuanto las resoluciones administrativas conlleven insertas en su texto de manera


expresa los fundamentos de hecho y de derecho, el sujeto sometido al proceso tendrá la plena
convicción respecto a que la decisión asumida por la autoridad es a todas luces justa; razón por
la cuál no le está permitido a la autoridad administrativa, reemplazar una adecuada y sustanciosa
fundamentación por una elemental relación de antecedentes. Por otra parte, tampoco puede
considerarse una adecuada motivación el hecho de únicamente efectuar citas normativas en el
texto resolutivo, tampoco es suficiente alegar que el actuar de la autoridad administrativa de
primera instancia fue conforme a derecho, omitiendo el pronunciamiento respecto a todos los
aspectos observados por la persona sometida a proceso, ya que el no pronunciarse en relación a
algún extremo planteado, desvirtúa el fondo mismo del fallo asumido, ingresando en el terreno
de la arbitrariedad, que a criterio de Legaz y Lacambra; "es una actitud antijurídica que consiste
en la negación del derecho como legalidad y cometida por el propio custodio de la misma, es
decir por el propio poder publico"

Los tratadistas Ossorio y Florit, afirman lo siguiente: “Frente a la absoluta libertad del juzgador
para apreciar y valorar las pruebas, y también frente a la restricción valorativa de la prueba legal,
surge el sistema de la sana crítica que deja al juez formar libremente su convicción, pero
obligándole a establecer los fundamentos de la misma”. De la misma forma, Eduardo
Couture, asevera que, “el juicio de valor en la sana crítica ha de apoyarse en proposiciones
lógicas correctas y fundarse en observaciones de experiencia confirmadas por la realidad”.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1171


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En conclusión, corresponde afirmar rotundamente, que la ausencia de una suficiente y


adecuada motivación, vulnera el derecho al debido proceso, persé el derecho a la defensa,
impidiendo que la tutela jurisdiccional administrativa sea efectiva, dando lugar al extremo
inaceptable de la arbitrariedad, aclarándose que la obligación de motivar las resoluciones
no significa que las decisiones adoptadas necesariamente deban satisfacer al administrado,
lo que si es trascendental, es que la decisión sea justificada, dando lugar a que de esta
manera se lleguen a emitir decisiones justas efectivizando el imperio de la justicia
constitucional de la igualdad, inserta en nuestra Constitución Política del Estado,
garantizando a los ciudadanos el ejercicio pleno de sus derechos constitucionales para el
“vivir Bien”.

III.3. El contenido esencial del derecho de petición

III.3.1. Jurisprudencia del derecho de petición

La SC 1995/2010-R de 26 de octubre, ha señalado: “(…)Con relación al segundo requisito que


establece que la solicitud debe ser presentada ante autoridad competente o pertinente, se debe
precisar que esta no es una exigencia del derecho de petición, pues aún cuando la solicitud se
presente ante una autoridad incompetente, ésta tiene la obligación de responder formal y
oportunamente sobre su incompetencia, señalando, en su caso, a la autoridad ante quien debe
dirigirse el peticionario; conclusión a la que se arriba por el carácter informal del derecho a la
petición contenido en la Constitución Política del Estado, que exige como único requisito la
identificación del peticionario, y en la necesidad que el ciudadano, encuentre respuesta y
orientación respecto a su solicitud, en una clara búsqueda por acercar al administrado con el
Estado, otorgándole a aquél un medio idóneo para obtener la respuesta buscada o, en su caso,
la información sobre las autoridades ante quienes debe acudir, lo que indudablemente, fortalece
el carácter democrático del Estado Boliviano.

En ese entendido, cuando la petición es dirigida a un servidor público, éste debe orientar su
actuación en los principios contemplados en el art. 232 de la CPE, entre otros, el principio de
compromiso e interés social, eficiencia, calidad, calidez y responsabilidad” (las negrillas nos
corresponden).

III.3.2. El derecho de petición en la Constitución Política del Estado

El art. 24 de la CPE, sostiene que: “Toda persona tiene derecho a la petición de manera
individual o colectiva, sea oral o escrita, y a la obtención de respuesta formal y pronta. Para el
ejercicio de este derecho no se exigirá más requisito que la identificación del peticionario”.

El derecho de petición es uno de los derechos esenciales para el acercamiento del Estado al
administrado, permitiendo un relacionamiento eficaz en igualdad de condiciones, contribuyendo
de esta manera a un mejor servicio público inclinado a favor del ciudadano. Ahora bien, la
respuesta que proporcione, no necesariamente debe ser satisfactoria para el administrado, habrán
situaciones que ameriten una respuesta negativa, sin que por aquellas se haya vulnerado éste
derecho.

Consiste también en el hecho que no solamente se obtenga una pronta respuesta, sea ésta
positiva o negativa, sino también que la misma debe contener una decisión de fondo respecto a
lo peticionado, proporcionando certeza respecto a lo que se le responde.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1172


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

El universo de administrados, requiere permanentemente de contestación a su sin número de


peticiones en busca de información, generando en el Estado la obligación de dar prontas
respuestas, motivando las mismas y explicando así sea brevemente el porqué de la respuesta,
más aún si la misma es negativa; ésta, necesariamente debe contener el porqué de la negativa,
las razones de ser del rechazo y el respaldo jurídico de dicha decisión. Las entidades públicas y
los servidores públicos se encuentran sometidos al principio de legalidad, razón por la cuál
únicamente deben cumplir lo establecido en determinada norma jurídica, que en el presente caso
devienen de una obligación de carácter constitucional.

III.4. Análisis del caso concreto

En el presente caso, fue denunciada la falta de motivación en la emisión de la RA 004/11, por la


cuál la Comisión de Régimen Disciplinario de la ANAPOL, determinó la baja definitiva sin
derecho a reincorporación de la dama cadete Lilian Yohana Pérez Alcón, por “existir a su
criterio suficientes elementos que generarían la convicción de que ha infringido el art. 39 inciso
B.3. Numeral 11) del Reglamento de Régimen Disciplinario de las Unidades Académicas de
Grado de la UNIPOL.

La falta de motivación, señala la accionante, se halla presente también en la Resolución de


recurso jerárquico 269/2011, notificada el 28 de octubre de la misma gestión, mediante la cual se
ratificó íntegramente la RA 004/11, considerando que ésta insuficiente motivación vulneró el
debido proceso, el derecho a la defensa y consecuentemente el derecho de petición, además de
existir dentro del proceso, incumplimiento de plazos procedimentales e incorrecta y sesgada
valoración de la prueba.

III.4.1. En cuanto al debido proceso

Tal cual se expresó en el Fundamento Jurídico III.3.2 de la presente Resolución, la adecuada


motivación de las resoluciones es un elemento del debido proceso en su faceta adjetiva, cuya
base debe tener como sustento el íter probatorio basado en una objetiva compulsa de la prueba,
relacionando íntimamente la normativa aplicable con el caso específico; extremo no concurrente
en el presente proceso constitucional, toda vez que del análisis efectuado se puede concluir que
no hubo una adecuada valoración y compulsa de las pruebas, sin que la presente afirmación
signifique en modo alguno que este Tribunal ingrese a la valoración de las mismas, quedando
claro únicamente el hecho que existía prueba documental contradictoria relacionada con la
existencia de dos certificaciones emitidas por el Órgano Electoral Plurinacional, ambas referidas
al estado civil de la ahora representada, pruebas que debieron ser analizadas y valoradas a
profundidad, hecho que no se produjo dando lugar a la arbitrariedad en primer lugar de la
Comisión de Régimen Disciplinario de la Academia Nacional de Policías ANAPOL y del
Vicerrector de la Universidad Policial Mariscal Antonio José de Sucre, en segunda instancia,
ambas de la Policía Boliviana.

Evidentemente, nos encontramos frente a un hecho de arbitrariedad, por cuanto el pedido de


pronunciamiento expreso respecto a la prescripción planteada, que inicialmente fue diferida para
su resolución en el Auto final, no obtuvo la respuesta motivada buscada, en razón a que la
Comisión arriba señalada realizó una escueta y poco fundada explicación del porque no era
aplicable la prescripción en autos, indicando únicamente que la institución matrimonial seguía
surtiendo efectos jurídicos, obviando la relevancia de la contradicción surgida de la
documentación aparejada al expediente administrativo, como era el hecho que no quedaba claro,
relacionado a cual de las partidas, matrimoniales era falsa.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1173


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Esta referida arbitrariedad fue confirmada y refrendada por el Vicerrector de la Universidad


Policial Mariscal Antonio José de Sucre de la Policía Boliviana ahora demandado, quien en la
Resolución de recurso jerárquico 269/2011, simplemente expresó algunos conceptos de carácter
doctrinal respecto al derecho disciplinario, considerando que la Comisión de Régimen
Disciplinario de la ANAPOL era “libre” (sic) de asignar el valor que vea por conveniente a los
elementos de prueba. Esta Resolución de revisión, debía garantizar el debido proceso en segunda
instancia, enmendando las deficiencias del Tribunal de primera instancia; en autos, en la
resolución de alzada no es posible apreciar el nexo lógico entre la decisión adoptada y la
argumentación que le sirve de fundamento.

De lo expuesto en el presente fundamento, se concluye que la RA 004/11, por la cuál se


determinó la baja definitiva sin derecho a reincorporación de la ahora representada y la
Resolución de recurso jerárquico 269/2011, han vulnerado el derecho al debido proceso en su
vertiente de motivación de las resoluciones. De la simple lectura de las resoluciones objetadas, a
las cuáles se les está atribuyendo la característica de atentar contra el debido proceso, se aprecia
que las mismas no guardan una adecuada relación respecto de los hechos y lo decidido, con lo
que se evidencia que no se ha respetado el contenido esencial del derecho que se invoca como
vulnerado, pues no ha existido una suficiente fundamentación jurídica, con lo que no se habría
cumplido con la exigencia constitucional de motivar las resoluciones administrativas
sancionatorias.

III.4.2. En lo referido al derecho a la defensa y al derecho de petición

En lo que respecta al derecho a la defensa, los argumentos esgrimidos precedentemente en el


Fundamento Jurídico III.3.1., son válidos y aplicables, por cuanto al haber existido lesión del
debido proceso, consecuentemente se ha transgredido el derecho a la defensa, en razón a que
ante la inexistente o insuficiente motivación, los argumentos de una sólida defensa se ven
restringidos, no pudiendo rebatirse los puntos de acusación de manera adecuada, ya que no se
puede sustentar defensa alguna sobre ambiguas acusaciones.

En lo relacionado con el derecho de petición, cabe señalar que las resoluciones deben
necesariamente contemplar todos los puntos demandados, sin significar que siempre deba existir
una respuesta positiva, sino, una respuesta fundamentada a todos los puntos apelados negativa o
positivamente, según corresponda; en el presente caso, se pudo constatar que éste derecho
también fue trasgredido, en razón a que la búsqueda de respuestas por parte de la hija de la
accionante, a través de la exigencia de una adecuada motivación y fundamentación en las
resoluciones de primera y segunda instancia, no fue atendida, consecuentemente su derecho a la
defensa se vio coartado, diluyendo la posibilidad de refutar con argumentos de hecho y jurídicos
la acusación y sanción, emergentes del proceso disciplinario.

De todo lo expuesto, se concluye que el Tribunal de garantías al haber concedido la tutela


solicitada, evaluó de manera correcta, y completa los datos del proceso y las normas aplicables
al mismo, en razón a que se constata la lesión de los derechos invocados por la accionante.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 24/2012
de 28 de febrero, cursante de fs. 71 a 74vta., dictada por la Sala Penal Tercera del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1174
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños-Magistrada


Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez-Magistrada
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0144/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00091-2012-01-AAC
Departamento: La Paz

En revisión la Resolución 02/2012-SSA-I de 7 de febrero cursante de fs. 292 a 293 vta.


pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional, presentado por Vivian Patricia
Chacón Auzza, Edino Claudio Clavijo Ponce y Rafael Luis Sejas Cárdenas en representación
de Gabriel Herbas Camacho, Contralor General del Estado a.i. contra Aida Luz Maldonado
Bocangel y René Pabón Ortuño, Vocales de la Sala Civil Primera del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 26 de enero de 2012, cursante de fs. 175 a 186 vta., los accionantes
expusieron los siguientes fundamentos:

I.1.1. Hechos que la motivan

El 18 de mayo de 2004, el entonces Contralor General de la República a.i., José Jorge Treviño
Paredes interpuso una demanda contra Luis Jiménez “Cortés”, Blanca Lucila Jiménez “Cortés” de
Vargas y María Nélida Jiménez “Cortés”, por prescripción adquisitiva de dominio o usucapión del
bien inmueble ubicado en la calle Indaburo, 168-78, con una extensión de 689.10 m2, -propiedad
colindante con el edificio que comparte la Contraloría General del Estado y el Ministerio de
Economía y Finanzas Públicas-. En dicho proceso, cumpliéndose con las etapas del proceso civil
ordinario, la Jueza Sexta de Partido en lo Civil y Comercial del departamento de La Paz, mediante
Sentencia 277/2006 de 6 de noviembre, declaró probada su demanda y ejecutoriada la misma
mediante Auto de 11 de diciembre de 2006.

Posteriormente, el Ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Alberto Arce Catacora, por
memorial de 9 de noviembre de 2009, se apersonó ante el Juzgado Sexto de Partido en lo Civil y
Comercial, dándose por notificado con la Sentencia 277/2006, solicitando al mismo tiempo la emisión
del Auto Aclaratorio de dicha Resolución; en consecuencia, ésta solicitud es contestada por el Contralor
General del Estado a.i. Gabriel Herbas Camacho, señalando que el impetrante nunca fue sujeto procesal
en el caso de autos, que su solicitud de aclaración no se encuentra respaldada por ninguna norma y el
plazo para oponerla precluyó.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1175


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Con el objeto de rectificar su primera petición, el Ministro Luis Alberto Arce Catacora,
apersonándose nuevamente al proceso civil ejecutoriado, procedió a plantear un incidente de
nulidad hasta la citación con la demanda, argumentando que se ve perjudicado en su derecho a la
propiedad, puesto que le asiste el 50% del bien inmueble en litigio y por haber omitido la
notificación con la demanda a los representantes del entonces Ministerio de Hacienda, que no
intervinieron como parte en el proceso de prescripción adquisitiva o usucapión decenal.

Respondido el incidente de nulidad por los representantes de la Contraloría General del Estado y
corridos los trámites de rigor, la Jueza Sexta de Partido en lo Civil y Comercial, emitió el Auto
Interlocutorio 238/2010 de 13 de octubre, por la que en base a los principios de especificidad,
trascendencia y convalidación, resolvió rechazar el incidente, ante dicha actuación pidieron
explicación, complementación y enmienda, que fue resuelta mediante Auto de 30 de noviembre de
2010.

A través de sus representantes legales, el Ministro de Economía y Finanzas Públicas, interpuso


recurso de apelación contra el Auto Interlocutorio 238/2010 y el Auto de 30 de noviembre de 2010,
por su parte la Contraloría General del Estado, también planteo recurso de apelación contra el Auto de
30 de noviembre de 2010, solicitando que se pronuncie en el fondo rechazando la solicitud de
explicación, complementación y enmienda, por no corresponder la misma y asimismo se declare
expresamente la ejecutoria de la Resolución 238/2010; en consecuencia, la Sala Civil Primera,
mediante Auto de 10 de febrero de 2011, concedió ambos recursos de apelación y a raíz de ello
emitió la Resolución 220/2011 de 21 de julio, que dispone: “se anula obrados hasta fs. 35 inclusive,
debiendo la Jueza a quo regularizar el proceso de acuerdo a los datos del mismo y a las normas
legales que rigen la materia…”, al respecto refieren que dicho Auto de Vista, que revoca una
resolución de rechazo de incidente, planteado en ejecución de sentencia, resulta ser lesivo a los
derechos y garantías constitucionales de la Contraloría General del Estado.

Refiere que, si el Ministro de Economía y Finanzas Públicas, al haberse dado por notificado con la
Resolución 220/2011 y entendiendo que la misma lesionaba sus derechos, no impugnó ni observó
el mencionado fallo, su derecho ha precluído porque no observó la supuesta anomalía procesal de
falta de notificación, lo que se denomina vicio consentido o principio de convalidación, asimismo
indica que en la Resolución 220/2011 no se ha considerado los extremos señalados a pesar que la
Contraloría General del Estado, ha dejado constancia de que no correspondía la nulidad de
obrados; por tanto, se ha vulnerado el derecho al debido proceso y el principio a la seguridad
jurídica.

En una segunda actuación sostiene que se ha vulnerado el debido proceso, los principios a la
seguridad jurídica y de congruencia; sin embargo, aclara que solamente pide la tutela al debido
proceso y los dos principios referidos también están vinculados con el debido proceso; por lo
que, continúa indicando de igual forma la Resolución 220/2011 no se ha pronunciado sobre el
recurso de apelación interpuesto por la Contraloría General del Estado, pues en dicha
Resolución el Tribunal de alzada se apartó de las previsiones legales que rigen el acto procesal,
más aún la fundamentación que debe contemplar toda Resolución; es decir, que en dicho fallo se
omite decidir cuestiones que son materia de expresión de agravios por el apelante, que es la
Contraloría General del Estado, en ese sentido las autoridades ahora demandadas no aplicaron
correctamente la facultad que les otorga el art. 15 de la Ley de Organización Judicial abrogada
(LOJ.1993), al contrario no observaron los presupuestos que deben concurrir para que proceda una
nulidad de obrados, por cuanto la labor hubiera circunscrito únicamente a advertir, que el recurso
de apelación del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas fue incoado de forma extemporánea
y la Resolución 238/2010 habría quedado ejecutoriada por el simple transcurso de tiempo ya que
no tenía competencia para pronunciarse de oficio por la anulación de obrados; asimismo, refiere
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1176
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que correspondía al Ministerio de Economía que directamente impugne la indicada Resolución y


no que soliciten explicación y enmienda, acto que procesalmente no correspondía por la naturaleza
del fallo.

En ese sentido, expresa que el Tribunal de alzada al dictar la Resolución 220/2011 de 21 de julio,
no analizó toda la prueba, al contrario se limitó a hacer mención a una supuesta confesión judicial
extemporánea, cuando la valoración de la prueba, debió realizarse de forma razonable y equitativa.

I.1.2. Derecho supuestamente vulnerado

Los accionantes consideran lesionado el derecho al debido proceso que solicitan se considere a
través de los principios de seguridad jurídica y congruencia, citando al efecto el art. 117 de la
Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se le conceda tutela y se declare la nulidad de la Resolución 220/2011 de 21 de julio


emitida por la Sala Civil Primera de la entonces Corte Superior de Justicia ahora Tribunal
Departamental de Justicia, disponiendo que dicha Sala emita un nuevo fallo en resguardo de la
garantía al debido proceso, confirmando la Resolución 238/2010 de 13 de octubre.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Efectuada la audiencia pública el 7 de febrero de 2012, conforme consta en el acta cursante de fs.
287 a 291 se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Los abogados de los accionantes, se ratificaron in extenso en los términos expuestos en la presente
acción, sosteniendo además que la Resolución 220/2011 no se ha pronunciado sobre el recurso de
apelación interpuesto por la Contraloría General del Estado, en dicha resolución el Tribunal de
alzada se apartó de las previsiones legales que rigen el acto procesal, más aún la fundamentación
que debe contemplar toda Resolución; es decir, que en dicha resolución se omite decidir cuestiones
que son materia de expresión de agravios por el apelante, que es la Contraloría General del Estado,
en ese sentido las autoridades ahora demandadas no aplicaron correctamente la facultad que les
otorga el art. 15 de la LOJ.1993, no observaron los presupuestos que deben concurrir para que
proceda una nulidad de obrados, por cuanto la labor hubiera circunscrito únicamente a advertir que
el recurso de apelación del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas fue incoado de forma
extemporánea y la Resolución 238/2010 habría quedado ejecutoriada por el simple transcurso de
tiempo, por ende no tenía competencia para pronunciarse de oficio por la anulación de obrados;
asimismo, refiere que correspondía al Ministerio de Economía y Finanzas Públicas que
directamente impugne la indicada Resolución y no que soliciten explicación, complementación y
enmienda, acto que procesalmente no correspondía por la naturaleza del fallo.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Los Vocales demandados, Franz René Pabón Ortuño y Aida Luz Maldonado Bocangel, Presidente
y Vocal de la Sala Civil Cuarta de la Corte Superior de Justicia de La Paz, ahora Tribunal
Departamental de Justica, por informe escrito cursante de fs. 210 a 211 vta., manifestaron: a)
dentro del proceso ordinario de usucapión extraordinaria seguido por la Contraloría General del
Estado contra Blanca Jiménez Cortes, la Jueza a quo observó el contenido de la demanda,
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1177
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

señalando que previamente cumpla con el art. 327 inc. 4) y 6) del Código de Procedimiento Civil
(CPC), por lo que, la Contraloría General del Estado obedeciendo dicha observación amplió la
demanda contra Luis Heriberto Jimenez Cortes y María Nélida Jimenez Cortes, indicando que
cumple con lo requerido, la autoridad jurisdiccional admitió la demanda sin que hubiese sido
observada, tomando en cuenta que el mismo demandante indicó en su memorial de demanda,
“…con la finalidad de evitar nulidades posteriores se notifique al Ministerio de Hacienda toda vez
que posee parte del edificio”; a la autoridad jurisdiccional le correspondía observar la demanda
respecto a la conformación de la litis consorcio necesario, aspecto que no fue realizado, como
tampoco ordenó que se notifique al Ministerio de Hacienda, conforme solicitó la parte
demandante; la autoridad jurisdiccional continuó el trámite del proceso dictando la Sentencia
277/2006 de 6 de noviembre, declarando probada la demanda; y, b) Luis Alberto Arce Catacora,
Ministro de Economía y Finanzas Públicas, por las anomalías advertidas presentó incidente, que
previo los trámites de rigor, la Jueza a quo dictó la Resolución 238/2010 de 13 de octubre de 2010,
rechazando el incidente, siendo apelada la misma, que como Tribunal de alzada, determinaron por
Auto de Vista 220/2011 de 21 de julio, anular obrados hasta el vicio más antiguo inclusive,
disponiendo que la Jueza a quo regularice procedimiento. Dicha fundamentación lo realizó
observando lo dispuesto por el Auto Supremo 255 de 26 de agosto de 2003, art. 255.2 del CPC, así
como lo dispuesto por el art. 76 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP).

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

Los terceros interesados, Teresa Patricia Lamadrid, Rodrigo Rolando Bueno Copa y Mary Patricia
Cordero Cárdenas en representación legal del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, (fs.
282 a 286) señalaron: 1) El accionante debe identificar cada derecho lesionado y explicar los
motivos por los que considera lesionados y la forma en que se habría lesionado; 2) Los accionantes
han transcrito Sentencias Constitucionales al igual que normas administrativas, sin embargo no
establecen con claridad las omisiones o actos ilegales cometidos por el Tribunal demandado; 3)
Una acción de amparo constitucional no es un recurso ordinario de alzada como pretende la parte
accionante, toda vez que en su pretensión busca la nulidad del Auto de Vista dictada por el
Tribunal de alzada; 4) La referida acción solo puede ser interpuesta, cuando se han agotado todas
las instancias dentro del proceso judicial y que al no haber acudido los accionantes a la vía
ordinaria, donde se podía modificar lo resuelto por el Tribunal de alzada, la vía judicial no había
terminado; 5) Por auto de vista 220/2011, en aplicación del art. 15 de la LOJ.1993 que se
encontraba vigente a momento de resolver la apelación interpuesta, se anuló obrados, porque el
Tribunal de alzada, advirtió errores en la tramitación de la causa sin ingresar a considerar el fondo
de las apelaciones, en razón a que no se abrió su competencia para conocer el fondo; y, 6) El
Tribunal demandado actuó conforme ha establecido el art. 15 de la LOJ.1993.

I.2.4. Resolución

Por Resolución 02/2012-SSA-I de 7 de febrero cursante de fs. 292 a 293 vta., la Sala Social
Administrativa Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, constituida en Tribunal
de garantías denegó la tutela solicitada en base a los siguientes fundamentos: i) La Sala Civil
Primera dictó la Resolución 220/2011, en uso de su facultad fiscalizadora prevista por el art. 15 de
la LOJ.1993 (vigente en su momento), anulando obrados; ii) El Auto de Vista que anuló la
Sentencia y otros actuados admite impugnación, siendo la vía idónea el recurso de casación, y al
haber sido notificada la representante legal de la Contraloría General del Estado con el Auto de
Vista 220/2011 no interpuso recurso alguno, ejecutoriándose tácitamente; iii) El Tribunal de
garantías no puede analizar defectos o errores procesales que no tienen relevancia constitucional, y
que la jurisdicción ordinaria tiene como atribuciones exclusivas la valoración de la prueba y la
interpretación de la legalidad ordinaria; iv) Al demandar la nulidad de la Resolución 238/2010 de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1178
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

13 de octubre de 2010, y disponer que la Sala emita nuevo fallo confirmando la Resolución
238/2010, petitum que resulta incongruente, no pudiendo a través de la presente acción, pretender
nuevamente analizar dichas tareas que corresponden a los tribunales ordinarios como si esta
instancia fuera una instancia adicional a la justicia ordinaria, es decir que la acción de Amparo
Constitucional no puede constituirse en una cuarta instancia en los procesos judiciales.

II. CONCLUSIONES

Del análisis del expediente y de la prueba aportada, se concluye lo siguiente:

II.1. La demanda de prescripción adquisitiva de dominio o de usucapión de un inmueble ubicado


en la calle Indaburo 168-78 con una extensión de 689,10 m2. -propiedad colindante con el edificio
que comparte la Contraloría General de la República y el Ministerio de Economía y Finanzas
Públicas-, interpuesta por Jorge Treviño Paredes, Contralor General de la República a.i. hoy
Contraloría General del Estado contra Blanca Jimenez de Vargas, solicitando en el otrosí tercero
“…con la finalidad de evitar nulidades posteriores, se notifique al Ministerio de Hacienda”. (fs. 3 a
4 vta.); y decreto de 21 de mayo de 2004 por el cual es observada la demanda por la Jueza Sexta de
Partido en lo Civil y Comercial del departamento de La Paz (fs. 5).

II.2. Memorial de ampliación de demanda contra Luis Heriberto Jimenez Cortes y María Nélida
Jiménez Cortes y decreto correspondiente de 2 de junio de 2004 por el que la Jueza admite la
demanda observada, sin pronunciarse respecto a lo solicitado por el demandante (fs. 6 a 7 vta.).

II.3. Resolución 277/2006 emitida por la Jueza Sexta de Partido en lo Civil y Comercial,
declarando probada la demanda interpuesta por el Contralor General de la República a.i.,
disponiendo su inscripción en Derechos Reales (DD.RR.) sobre el inmueble ubicado en la calle
Indaburo 168-78. (fs. 42 y 43 vta.) y Auto de 11 de diciembre de 2006, declarando ejecutoriada la
sentencia, dictada por la referida Jueza (fs. 46 vta.).

II.4. El Ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Alberto Arce Catacora, por memorial de 9
de noviembre de 2009, se apersonó ante el Juzgado Sexto de Partido en lo Civil y Comercial,
dándose por notificado con la Resolución 277/2006, pidiendo al mismo tiempo la emisión del Auto
Aclaratorio de dicha Resolución (fs. 55 a 57 vta.); en consecuencia tal petición es contestada por el
Contralor General del Estado a.i. Gabriel Herbas Camacho, en la cual señala que el impetrante
nunca ha sido ni fue sujeto procesal en el caso de autos y que su pedido de aclaración no se
encuentra respaldada por ninguna norma y hasta esa fecha su derecho precluyó por la caducidad
del tiempo para oponerlas (fs. 62 y vta.).

II.5. Memorial de 25 de enero de 2010 presentado por Luis Alberto Arce Catacora, Ministro de
Economía y Finanzas Públicas planteando incidente de nulidad hasta la citación con la demanda.
(fs. 64 a 66), decreto de 29 de enero de 2010 emitido por la Jueza Sexta de Partido en lo Civil en el
que corre en traslado el incidente planteado, (fs. 66 vta.); respuesta al incidente de Gabriel Herbas
Camacho, Contralor General del Estado a.i., exigiendo el rechazo (fs. 68 a 70), y decreto de 15 de
marzo de 2010 mediante el cual la referida Jueza abre un término probatorio de seis días comunes
a las partes (fs. 70 vta.).

II.6. Resolución Interlocutoria 238/2010 de 13 de octubre de 2010, emitida por la Jueza Sexta en lo
Civil y Comercial, rechazando el incidente de nulidad interpuesto, Ministro de Economía y
Finanzas Públicas. (fs. 107 y vta.).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1179


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.7. El 28 de octubre de 2010, María Inés Vera de Ayora, Directora General de Asuntos Jurídicos
del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, pide explicación, complementación y enmienda a
la Resolución 238/2010 (fs. 110 y vta.), y Auto de 30 de noviembre de 2010 por el que la Jueza
Sexta de Partido en lo Civil y Comercial desestima la petición (fs. 111).

II.8. Memorial de apelación interpuesta por María Inés Vera de Ayoroa, Directora General de
Asuntos Jurídicos del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas contra la Resolución 238/2010
(fs. 113 a 118); y Edino Claudio Clavijo Ponce, Gerente de Servicio Legales de la Contraloría
General del Estado interpone recurso de apelación contra el auto de 30 de noviembre de 2010. (fs.
119 y vta.).

II.9. Auto de Vista 220/2011, emitida por la Sala Civil Primera del Tribunal Departamental de
Justicia de La Paz, por el que anula obrados hasta fojas 35 inclusive, señalando que la Juez a quo
regularice el procedimiento de acuerdo a los datos del mismo. (fs. 132 a 134 vta.); y ejecutoria de
la misma por Auto de 7 de septiembre de 2011 (fs. 145) y notificación (fs. 146 y vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

La parte accionante alega la vulneración del derecho al debido proceso que solicitan se considere a
través de los principios de seguridad jurídica y congruencia, alegando que los Vocales demandados
al tramitar una apelación contra una resolución que resolvió un incidente de nulidad inobservaron
que: a) Ejecutoriada la Sentencia 277/2006, mediante Auto de 11 de diciembre de 2006, el
Ministerio de Hacienda -ahora Ministerio de Economía y Finanzas Públicas- al solicitar la
aclaración de dicha Resolución por memorial de 9 de noviembre de 2009, convalidó las
actuaciones hasta ese momento producidas, por lo que posteriormente no podía plantear incidente
de nulidad; b) Contra el Auto que resolvió rechazar la nulidad en primera instancia al constituirse
en un Auto interlocutorio simple, no podía solicitarse la aclaración, complementación y enmienda,
provocando que la apelación contra la Resolución que rechazo el incidente de nulidad se
interponga fuera de término; y, c) El tribunal de apelación emitió un fallo citra petita y carente de
fundamentación debido a que omitió decidir cuestiones que eran materia de expresión de agravios.

En consecuencia corresponde verificar los hechos denunciados para establecer si se debe o no


conceder la tutela solicitada.

III.1. La justicia material como finalidad del sistema de administración de justicia boliviano

La existencia de conflictos individuales y colectivos entre los habitantes del Estado Boliviano, es
propia e inherente a la convivencia social y se ve profundizada por la pluralidad existente en el país
(art. 1 de la CPE), pese a ello la conflictividad per se no debe asumirse como un problema sino
como una oportunidad de maximizar los valores del diálogo democrático sobre los cuales deben
estructurarse los mecanismos de resolución de conflictos tanto procesales o formales como
extraprocesales o informales.

La finalidad y realidad anteriormente descrita provoca reconocer que la estructura del sistema de
administración de justicia boliviano, no pueda concebirse como un fin en sí mismo, sino como un
medio para obtener el logro y realización de los valores constitucionales, por otra parte impele a
reconocer la prevalencia del derecho sustantivo sobre el derecho adjetivo o sobre las formas
procesales, que a su vez y en el marco del caso analizado obliga a los administradores de justicia
entre otros a procurar la resolución del fondo de las problemáticas sometidas a su jurisdicción y
competencia dejando de lado toda nulidad deducida de formalismos o ritualismos procesales que
impidan alcanzar un orden social justo en un tiempo razonable.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1180
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Así sucedió por ejemplo, en materia de notificaciones irregulares que sin embargo cumplen su
finalidad, la SC 0821/2002-R de 15 de julio, referido a un proceso laboral en la que la empresa
demandante alegó haber sido notificada erróneamente mediante su abogado y no de forma personal
provocó que el Tribunal Constitucional establezca lo siguiente: “…Que la notificación personal al
abogado de la empresa demandada en el domicilio procesal señalado es legal, al haber cumplido
la finalidad de que la empresa perdidosa tenga conocimiento de la sentencia pronunciada dentro
del proceso social (…) no es posible invocar la nulidad de la notificación por no haber sido
personal, pues los actos procesales son válidos en la medida en que cumplen adecuadamente la
finalidad que conllevan, sin lesionar un derecho fundamental o alguna garantía constitucional, sin
que meras formalidades insustanciales puedan invalidar los mismos, más aún cuando, por lo
señalado, no se produjo la indefensión de la empresa perdidosa…”.

Es decir las nulidades procesales se encuentran reservadas únicamente a casos extraordinarios


expresamente establecidos en la ley, generalmente relacionados a una indefensión absoluta
provocada a las partes procesales o a terceros con interés legítimo y que generen una situación
injusta de cosas respecto a la cual los jueces no pueden quedar indiferentes. Para ello todo juez
debe tener la capacidad de identificar desde un inicio los actuados u omisiones, que en el futuro
podrían provocar una nulidad e impedir que los mismos se desarrollen inadvertidamente hasta
llegar a consumarse.

En este contexto, entre los mecanismos de la jurisdicción ordinaria para preservar el orden público
constitucional al interior de los diferentes procesos se tienen a:

1) La facultad de los tribunales ad quem de revisar de oficio la tramitación de las causas en primera
instancia que en la abrogada Ley de Organización Judicial se traducía en el art. 15 que establecía
que: “Los tribunales y jueces de alzada en relación con los de primera instancia y los de casación
respecto de aquellos, están obligados a revisar los procesos de oficio, a tiempo de conocer una
causa, si los jueces y funcionarios observaron los plazos y leyes que norman la tramitación y
conclusión de los procesos para aplicar en su caso las sanciones pertinentes”, análisis lógicamente
previo al conocimiento del contenido de las apelaciones, porque en caso de encontrarse un vicio
sancionado en la ley con nulidad correspondía disponerse la misma, sin ingresar a conocer el fondo
de las problemáticas planteadas vía apelación.

En este sentido, la SC 0863/2003-R de 25 de junio, dentro de un concurso voluntario de


acreedores, ante la nulidad de un remate determinado por los vocales en ese entonces demandados,
el Tribunal Constitucional dejó sin efecto dicha determinación alegando que: “…si bien el art. 15
LOJ, faculta a los tribunales de manera general a declarar nulos los actos procesales en los que
adviertan vicios, dicha disposición debe ser interpretada en concordancia con otras, pues en
materia civil el art. 251 CPC, dispone expresamente que ningún trámite o acto judicial será
declarado nulo si la nulidad no estuviere expresamente determinada por ley…” entendimiento
generalmente aplicado en concordancia con el art. 247 de la LOJ.1993 que disponía “La nulidad o
reposición de obrados sólo será procedente por falta de citación con la demanda, notificación con
la apertura del término de prueba y notificación con la sentencia”.

Asimismo la SC 0196/2010-R de 24 de mayo, ante una nulidad de un proceso de asistencia


familiar estableció: “…si bien el art. 236 del CPC, establece que el auto de vista deberá
circunscribirse precisamente a los puntos resueltos por el inferior y que hubieran sido objeto de la
apelación y fundamentación a que se refiere el art. 227 del CPC, excepto lo dispuesto en la parte
final del art. 343 del mismo cuerpo legal; precepto que prácticamente marca los límites a los que
debe sujetarse la resolución de un recurso de apelación, debiendo, en consecuencia, la autoridad
judicial fundamentar su fallo de acuerdo al contenido y a los puntos apelados por el agraviado;
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1181
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

sin embargo, es también evidente que por mandato del art. 15 de la LOJ, los jueces y tribunales de
apelación tienen el deber de revisar de oficio los procesos sometidos a su conocimiento para
establecer si la autoridad judicial inferior observó o no los plazos y las leyes que norman la
tramitación y conclusión de los procesos, y en los casos en que se advierta que la actividad
procesal se llevó a cabo con infracción de formas o procedimientos que la ley procesal ha previsto
para su validez, le corresponde aplicar la nulidad para sanear el proceso y restablecer o asegurar
la vigencia del debido proceso, que no sólo es una garantía jurisdiccional, sino también un
derecho”.

Por su parte, la Ley del Órgano Judicial vigente limita dicha posibilidad a casos estrictamente
necesarios previstos en la ley conforme su art. 17.I que sostiene: “La revisión de las actuaciones
procesales será de oficio y se limitará a aquellos asuntos previstos por ley” y considerando el
principio de preclusión exige además en su art. 16.I que: “Las y los magistrados, vocales y jueces,
deberán proseguir con el desarrollo del proceso, sin retrotraer a las etapas concluidas, excepto
cuando existiera irregularidad procesal reclamada oportunamente y que viole su derecho a la
defensa conforme a ley” (la negrilla es añadida).

Asimismo, toda nulidad originada en la deficiente tramitación del proceso genera responsabilidad
del administrador de justicia conforme el art. 17.IV de la Ley del Órgano Judicial (LOJ) que
establece: “En caso de nulidad de obrados o una reposición de actuados, el tribunal deberá
comunicar de oficio la decisión al Consejo de la Magistratura a los fines de ley”, es decir que en
grado de apelación los tribunales ad quem en materia civil deben considerar al menos:

i) Se encuentran prohibidas las nulidades originadas en formalismos o ritualismos procesales lo


que ocasiona que las nulidades deban encontrarse expresamente previstas en la ley.

ii) Las nulidades deben reclamarse oportunamente, pues resulta reprochable a la parte procesal que
conociendo la existencia de una causal de nulidad permita el avance del proceso, para pedir dicha
declaración, esto porque esa conducta no condice con el principio de lealtad procesal.

iii) La nulidad no puede originarse en la negligencia de la parte procesal que solicita la misma, lo
que concuerda con el principio general del derecho que establece que “Nadie puede alegar su
propia torpeza”.

iv) No puede declararse nulidad por actos que la parte procesal haya consentido o convalidado, en
general las nulidades están reservadas a situaciones en las que se generó indefensión.

v) La declaratoria de nulidad imputable a la deficiente tramitación del órgano de administración de


justicia debe generar responsabilidad funcionaria.

2) La posibilidad de dejar sin efecto la llamada cosa juzgada “aparente” que es aquella obtenida en
franca y manifiesta violación de derechos fundamentales y derechos humanos, porque no es
posible alcanzar un orden social justo y en definitiva la paz social reconocidos por la doctrina
como fines del derecho, con resoluciones que a la vista del colectivo resultan ser obtenidas de
forma injusta.

Dicha posibilidad puede concretarse mediante el planteamiento de incidentes de nulidad así la SC


0151/2006-R de 6 de febrero, sostuvo que: “En este estado, es necesario dejar establecido que es
perfectamente posible el planteamiento del incidente de nulidad en ejecución de Sentencia buscando
la reparación de un proceso ilegal por vulneración de derechos y garantías, y de ningún modo ello
puede ser considerado como una situación en la que el Juez esté revisando su propia actuación pues
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1182
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

como lo reconoce la doctrina los actos procesales desarrollados en vulneración de derechos y


garantías se reputan como inexistentes…” posición ratificada en la SC 0133/2010-R de 17 de mayo,
entre otras.

Mediante el planteamiento de acciones tutelares entre las cuales se encuentra el amparo


constitucional que procede previo el agotamiento de los recursos intra-procesales idóneos. Este
criterio fue asumido por el entonces Tribunal Constitucional desde sus inicios, así el AC 111/99-R
de 6 de septiembre, dentro de un proceso civil estableció que “…el juez recurrido ha procedido a
trabar embargo de un bien inmueble de menores no comprendidos en la relación procesal y sin
intervención del Fiscal cometiendo de esa manera un acto ilegal, que no ha sido corregido, no
obstante la decisión de la Corte de Apelación, bajo el único argumento de que la sentencia y el
auto de adjudicación del recurrente están ejecutoriados…que, cuando una resolución ilegal y
arbitraria, afecta al contenido normal de un derecho fundamental (el de propiedad en este caso),
no se puede sustentar su ilegalidad bajo una supuesta "cosa juzgada"; en cuyo caso
inexcusablemente se abre el ámbito de protección del Amparo Constitucional; consagrado por el
Art. 19 de la Constitución Política del Estado…” posición ampliamente consolidada a través de los
años.

III.2. De la improcedencia del recurso de casación contra autos de vista que resuelven en
apelación incidentes de nulidad planteados en ejecución de sentencia civil

La Constitución Política del Estado en su art. 180.II “…garantiza el principio de impugnación en


los procesos judiciales” constituyéndose en una garantía contra errores o la mala fe de los
administradores de justicia que permite se revisen las decisiones de fondo, constituyéndose la
apelación en una modalidad del ejercicio del derecho a la impugnación que permite a los litigantes
impugnar ante el tribunal de segundo grado o ad quem, una resolución que consideran injusta, para
que la modifique, la revoque, la deje sin efecto o anule, según sea el caso.

El art. 223 del CPC determina: “Tres son los efectos que produce la apelación: Suspensivo,
devolutivo y diferido. El primero suspende la competencia del juez, impidiendo la ejecución de la
sentencia o auto definitivo; el segundo le permite continuar la tramitación del proceso sin perjuicio
del recurso; y el tercero permite que sin perjuicio del cumplimiento de la resolución apelada, se
reserve la concesión de la alzada hasta el estado de una eventual apelación de la sentencia”.

A través de la SC 0676/2010-R de 19 de julio que ratifica el entendimiento contenido en la SC


0981/2002-R de 16 de agosto, se tiene establecido jurisprudencialmente que: “…el art. 518 del
CPC, determina que las resoluciones dictadas en ejecución de sentencia serán susceptibles
únicamente del recurso de apelación directa…” línea jurisprudencial que ha sido mantenida en las
SSCC 0261/2001-R, 0671/2002-R, 0598/2003-R, 0710/2003-R, 0852/2003-R y 0889/2003-R entre
otras. Lo anterior entonces impele a diferenciar entre:

a) La nulidad dispuesta en apelación de una sentencia que al tenor del art. 255.2 del CPC admite
casación.

b) La nulidad dispuesta en razón del planteamiento de un incidente de nulidad en ejecución de


sentencia contra una sentencia que adquirió la calidad de cosa juzgada aparente que provoca
indefensión absoluta y que únicamente admite la apelación directa pero no la casación.
En este sentido, la SC 1300/2010-R de 13 de septiembre, hizo referencia a un proceso sumario de
nulidad de escritura pública en la cual cuando ya existía sentencia ejecutoriada, se produjo un incidente
de nulidad que provocó se dispusiera la nulidad de obrados hasta la admisión de la demanda, decisión
confirmada en apelación y contra la cual se planteó casación que a criterio del Tribunal Constitucional se
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1183
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

tramitó indebidamente pues contra las resoluciones en ejecución de sentencia no procede la casación, así
se estableció que: “…si sólo procede el recurso de apelación en el efecto devolutivo -sin recurso
ulterior- no correspondía el recurso de casación, por lo que las autoridades demandas debieron
rechazar este recurso, pues no estaban legalmente habilitadas para conocer el mismo…”.

III.3. El análisis del caso concreto

El Ministerio de Hacienda -ahora Ministerio de Economía y Finanzas Públicas- como tercero


interesado a la litis principal, en razón a que conjuntamente a la Contraloría General de la
República -ahora Contraloría General del Estado- habría tenido la posesión del bien inmueble que
se intentaba usucapir, creyéndose afectado por la Resolución 277/2006, no contaba con la
posibilidad de utilizar el recurso de apelación conforme al tenor del art. 222 del CPC, porque esta
sentencia ya se encontraba ejecutoriada y tampoco le era exigible el planteamiento de tercería de
dominio excluyente conforme el art. 360.I del CPC en razón a la naturaleza del proceso de
usucapión en el cual precisamente se pretende alcanzar una resolución declarativa que formalice el
derecho propietario, aspectos a considerar en el caso concreto y que hacían del incidente de nulidad
idóneo, para el resguardo de los derechos de la parte procesal afectada.

Con referencia al fondo de la problemática la parte accionante alega que 1) Ejecutoriada la


Resolución 277/2006 de mediante auto de 11 de diciembre de 2006, el Ministerio de Hacienda -
ahora Ministerio de Economía y Finanzas Públicas- a través de su representante el 9 de noviembre
de 2009, solicita la aclaración de dicha sentencia convalidando las actuaciones hasta ese momento
producidas por lo que luego no podía plantear incidente de nulidad; 2) Contra el auto que resuelve
rechazar la nulidad en primera instancia al constituirse en un auto interlocutorio simple no podía
solicitarse la aclaración, complementación y enmienda lo que provocó que la apelación contra la
resolución que rechazó el incidente de nulidad se encuentre fuera de término; y, 3) El tribunal de
apelación emitió un fallo citra petita y carente de fundamentación debido a que omitió decidir
cuestiones que eran materia de expresión de agravios.

Analizados los antecedentes del caso, los Vocales invocando los arts. 15 y 247 de la LOJ.1993,
previamente a ingresar a analizar el fondo de las apelaciones planteadas por las partes procesales y
de la problemática en general, en uso de su facultad fiscalizadora, concluyeron que el Juez de la
causa observó la demanda civil de usucapión planteada por la parte accionante disponiendo se
esclarezca la calidad en la que se notificaría al Ministerio de Hacienda, pero ignorando su propia
determinación procedió a admitir la demanda una vez subsanada dejando que el proceso continúe
hasta su conclusión, aspecto que a su criterio indudablemente afectó el derecho a la defensa del
Ministerio referido en su calidad de tercero interesado que también se encontraría ejerciendo la
posesión sobre el bien en litigio, razonamiento que para éste Tribunal no resulta arbitrario.

Al respecto, debe recordarse que la jurisdicción constitucional, no puede interferir en la labor


interpretativa y valorativa de los órganos que administran justicia, a no ser de que en el interín se hayan
afectado o vulnerado derechos fundamentales o garantías constitucionales; así la SC 1390/2011-R de 30
de septiembre, establece: “La Jurisprudencia Constitucional, además de establecer los límites para la
procedencia de la acción de amparo contra decisiones judiciales, construyó la doctrina de las auto
restricciones (self restraint), para la jurisdicción constitucional, con el objeto de delimitar los ámbitos
entre ésta y la jurisdicción ordinaria; en ese marco, una de ellas es precisamente la no interpretación de
la legalidad ordinaria; al respecto, la SC 1846/2004-R de 30 de noviembre, señaló: 'Si bien la
interpretación de la legalidad ordinaria debe ser labor de la jurisdicción común, corresponde a la
justicia constitucional verificar si en esa labor interpretativa no se han quebrantado los principios
constitucionales informadores del ordenamiento jurídico, entre ellos, los de legalidad, seguridad
jurídica, igualdad, proporcionalidad, jerarquía normativa y debido proceso; principios a los que se
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1184
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

hallan vinculados todos los operadores jurídicos de la nación; dado que compete a la jurisdicción
constitucional otorgar la protección requerida, a través de las acciones de tutela establecidas en los
arts. 18 y 19 de la Constitución, ante violaciones a los derechos y garantías constitucionales,
ocasionadas por una interpretación que tenga su origen en la jurisdicción ordinaria, que vulnere
principios y valores constitucionales…”; en virtud de la misma auto restricción, tampoco es posible que
la jurisdicción constitucional ingrese en la revisión de la valoración de la prueba efectuada por los
tribunales de grado, siendo que para este extremo, el demandante debió fundamentar en su acción la
concurrencia de los siguientes requisitos: “1) Que la valoración se aparte de los marcos legales de
razonabilidad y equidad (SC 0873/2004-R y 0106/2005-R, entre otras); o 2) Cuando la Resolución que
determine una sanción haya omitido arbitrariamente valorar la prueba y su lógica consecuencia sea la
lesión de derechos fundamentales y garantías constitucionales…” (SC 2764/2010-R de 10 de
diciembre); por último, la jurisdicción constitucional no constituye última instancia, para rever las
decisiones de los órganos de administración de justicia ordinaria, como sucede en el presente caso.

Lo anterior lleva a concluir que el tribunal de apelación demandado en el presente amparo


constitucional no emitió una resolución citra petita ni vulneró el debido proceso en su elemento
configurativo del derecho a una resolución debidamente motivada y fundamentada, ello en razón a
que como se dejó sentado líneas precedentes, en realidad, no se abrió la competencia del tribunal
de alzada para efectuar consideraciones de fondo, pues se encontraba frente a una imposibilidad
material de atender los petitorios formulados en las apelaciones en función que concluyó que
ameritaba la aplicación de los arts. 15 y 247 de la LOJ.1993.

En ese sentido, con referencia a los otros aspectos alegados por la parte accionante y atingentes al
fondo de la problemática, es necesario hacer notar que no corresponde a la jurisdicción
constitucional resolver respecto a derechos controvertidos, los cuales, en el marco de lo establecido
en la normativa legal aplicable según corresponda, deben ser analizados y resueltos en la justicia
ordinaria, así lo entendió el Tribunal Constitucional en su uniforme jurisprudencia como es el caso
de las SSCC 0855/2004, 1959/2004-R y 1457/2011-R entre otras.

Por otra parte, el Tribunal procedió a admitir la demanda de amparo constitucional y esperó a
celebrar la audiencia tutelar para denegar la tutela, con el fundamento de que no se había observado
el principio de subsidiariedad, en razón a que contra el auto de vista que dispuso de oficio la
nulidad de obrados a su entender procedía la casación. En ese sentido, conforme lo desarrollado en
el Fundamento Jurídico III.2, al provenir el auto de vista de la apelación de un incidente de nulidad
planteado en ejecución de sentencia únicamente, procedía la apelación directa a tramitarse en el
efecto devolutivo conforme al art. 518 del CPC, por lo que la casación no se constituía en un
recuso idóneo a agotar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de las atribuciones que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 02/2012-
SSA-I de 7 de febrero, cursante de fs. 292 a 293 vta., pronunciada por la Sala Social
Administrativa Primera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz; y, en consecuencia,
DENEGAR con otro fundamento la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra.Neldy Virginia Andrade Martínez Magistrada


Dra.Ligia Mónica Velásquez Castaños-Magistrada
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1185
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA


INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0145/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00072-2012-01-AAC
Departamento: Beni

En revisión la Resolución 002/2012 de 27 de enero, cursante de fs. 289 a 290, pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional, interpuesta por Yolanda Semo Suárez,
Giovana Arce Mapatoto, Sonia Tamo Yubanure, Florencio Durán Aguilera, Mercedes
Durán Aguilera, Erika Baleriano Moisés, Eduardo Maza Iba y Diana Salvatierra
González, representantes de la junta vecinal ”Primero de Mayo” contra Moisés Shriqui
Vejarano, Mery Elina Zabala Montenegro, Rodolfo Coímbra Canido, Rodney Yasir
Mercado Vaca, Alberto Stanley Munguía Ortiz, Lorena Inchauste Suárez, Benigna
Mancilla Condori, Marco Antonio Gutiérrez Nuñez, Margarita del Carmen Fernández
Claure, Nelson Villazón Ribera, Consuelo Viruéz Ruiz de Bolling y Gary Cholima Vaca,
Alcalde y Concejales del Gobierno Autónomo Municipal de la Santísima Trinidad; y los
hermanos José Luis, María Luisa y Aida Mery Aguilera Villavicencio.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Los accionantes mediante memorial presentado el 2 de enero de 2012, cursante de fs. 48 a 56,
manifestaron que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

A mediados de 1999, un grupo de personas necesitadas de contar con un techo propio tomaron
posesión sobre los terrenos situados entre la av. Circunvalación, ingreso del BIM II “Tocopilla”,
los canales de las ex tuberías que conducen a laguna “La Bomba” y por el sur con las lagunas de
“oxidación”, hoy jurisdicción territorial de la junta vecinal “Primero de Mayo” con una
superficie de 17 ha. 9200 m2. Siendo así, que desde esa fecha procedieron a gestionar la apertura
de calles y conseguir la instalación correspondiente del servicio de energía eléctrica e incluso
obligaron al municipio de la Santísima Trinidad, a construir un tanque de agua potable.

Agregan que hasta el 2004, no se tenía certeza de quiénes eran los verdaderos propietarios de
dichos terrenos debido a que en determinados momentos se presentaban los hermanos José Luis,
Aida Mery y María Luisa Aguilera Villavicencio y en otros, con documentación en mano Ana
María del Águila Álvarez; pero, como el dirigente de ese entonces respondía a los “mandados”
de los hermanos Aguilera Villavicencio, creyendo en la honestidad, lealtad y sinceridad de sus
dirigentes, se pensó que ellos eran los verdaderos propietarios. Posteriormente, el 2005, al
producirse la renovación del Directorio de la junta vecinal antes mencionada, obtuvieron la
personería jurídica, optando de esta manera dejar de pagar los lotes a ambas familias. Luego de
obtener las certificaciones del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), como de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1186
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Derechos Reales (DD.RR.), se llegó a la conclusión de que la única propietaria era Ana María
del Águila Álvarez, con quién suscribieron el contrato de transferencia de 17,92 has. de terreno
el 24 de mayo de 2007, los mismos que fueron registrados en derechos reales bajo la matrícula
8.01.1.01.0000462.

Asimismo, señalan que a principios del 2005, los hoy accionantes, hicieron conocer al Alcalde
Municipal Moisés Shriqui Vejarano sobre las dudas que tenían respecto a la documentación de
derecho propietario de los hermanos Aguilera Villavicencio, por lo que, en una asamblea la
autoridad edilicia indicó que respetaría la decisión que emitían los jueces, sugiriendo además
que debían acudir a la instancia jurisdiccional para efectos de absolver dichas dudas, por lo que
se inició las acciones legales contra los referidos ciudadanos. Sin embargo, José Aguilera
Villavicencio presentó una acción penal contra la junta vecinal “Primero de Mayo” por
asociación delictuosa, despojo y otros; que fue rechazada por el Ministerio Público, como en las
tres instancias de la justicia ordinaria. Pese a ello, el 2010, los hermanos Aguilera Villavicencio
presentaron ante el Juez Tercero de Instrucción en lo Civil y Comercial, una demanda sumaria,
donde plantearon: La anulabilidad del documento de transferencia celebrado el 24 de mayo de
2007, entre la junta vecinal “Primero de Mayo” y Ana María del Águila Álvarez; acción
reivindicatoria; acción negatoria de derechos y pago de daños y perjuicios, la misma que
mediante Resolución 62/10 de 30 de septiembre, fue declarada improbada y una vez impugnada
por Auto de Vista 04/2011 de 18 de febrero, el Juez Segundo de Partido en lo Civil y Comercial,
confirmó en todas sus partes la Sentencia de primera instancia y ante la no interposición de
ningún recurso de impugnación, el 14 de marzo del 2011 se dio por ejecutoriada la Resolución
que fue dictada por el Juez de alzada, significando ello la total validez y vigencia de la
documentación que determinaba que la junta vecinal “Primero de Mayo” era la legítima
propietaria de esas tierras.

Refieren también, que una vez ejecutoriados los dos procesos -penal y civil-, el 16 de marzo de
2011, mediante nota dirigida al Alcalde Municipal, se le informó sobre el resultado de ambos
procesos, pero en respuesta a ello de manera sorpresiva se decretó la Ordenanza Municipal
(OM) 14/2011 de 12 de mayo, por la que se aprobaba la urbanización “San Luis” de propiedad
de los hermanos Aguilera Villavicencio, con una superficie de 21 ha. sobreponiéndose en un
cien por ciento a los terrenos legítimamente adquiridos por la citada junta vecinal “Primero de
Mayo”, sobre los cuales sus afiliados tenían construidas sus viviendas. Además que, los
Concejales Municipales para justificar sus acciones señalaron que la aprobación no significaba
un reconocimiento de mejor derecho propietario a favor de la familia Aguilera Villavicencio.
Sin embargo, pese a haber sido alertados sobre el derecho de propiedad de los terrenos,
procedieron con la aprobación de esa urbanización en desmedro de la junta vecinal.

Ante esa situación, los accionantes el 31 de octubre de 2011, con la finalidad de que el Concejo
Municipal, analice el daño causado a la Junta Vecinal, solicitaron la reconsideración de la
Ordenanza Municipal referida, la misma que fue denegada mediante nota 380/11 de 4 de
noviembre, por lo cual dieron cuenta que el Pleno por decisión unánime determinó rechazar.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes estiman vulnerados sus derechos a un hábitat y vivienda adecuada que
dignifiquen su vida familiar y comunitaria, a los servicios básicos y a la propiedad privada,
citando al efecto los arts. 14.III, 19.I, 20.I, 22, 56, 108.2 y 109.I de la Constitución Política del
Estado (CPE).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1187


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

I.1.3. Petitorio

Solicitan se conceda la tutela, disponiendo se deje sin efecto: a) La OM “14/2011” de 12 de


mayo, mientras se defina el mejor derecho propietario entre la junta vecinal “Primero de Mayo”
y los hermanos Aguilera Villavicencio; y, b) Se abstengan de ejercer algún acto de disposición
de las tierras en estricto cumplimiento a la Sentencia dictada por el Juez Tercero de Instrucción
en lo Civil y Comercial, por la que se les fue negada la reivindicación sobre dichos terrenos que
son de propiedad de la junta vecinal “Primero de Mayo”, toda vez que al presente están
vendiendo los mismos de manera ilícita, sea con imposición de costas y responsabilidad civil y
penal.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 27 de enero de 2012, según consta en el acta cursante de fs.
280 a 288 vta. de obrados, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

Los accionantes, mediante su abogado en audiencia ratificaron en su integridad el memorial de


acción de amparo constitucional.

I.2.2. Informe de las autoridades y personas demandadas

Las autoridades demandadas, Moisés Shriqui Vejarano, Mery Elina Zabala Montenegro,
Rodolfo Coímbra Canido, Rodney Yasir Mercado Vaca, Alberto Stanley Munguía Ortiz, Lorena
Inchauste Suárez, Benigna Mancilla Condori, Marco Antonio Gutiérrez Núñez, Margarita del
Carmen Fernández Claure, Nelson Villazón Ribera, Consuelo Viruéz Ruiz de Bolling y Gary
Cholima Vaca, Alcalde y Concejales del Gobierno Autónomo Municipal de la Santísima
Trinidad, presentaron informe escrito cursante de fs. 271 a 279 señalando: 1) Los accionantes
pretenden hacer creer que se han vulnerado sus derechos constitucionales; sin embargo, con la
prueba documental que adjuntan y lo manifestado en la demanda, demuestran lo contrario, toda
vez que en la Resolución 62/10 dictada dentro del proceso sumario de reivindicación, acción
negatoria, anulabilidad de contrato más daños y perjuicios y reconvención por acción negatoria
y mejor derecho propietario, en la primera parte resolutiva, el Juez de la causa declaró
improbada la demanda interpuesta por los hermanos Aguilera Villavicencio contra Juan Gustavo
del Águila Mejía, Yolanda Semo Suárez, Yobana Yumacale Manu, Ramón Mosua Méndez y
Raúl Melgar Guasase y en la segunda parte, también declaró improbada la demanda de
reconvención por acción negatoria y mejor derecho propietario interpuesta por estos últimos,
contra los hermanos Aguilera Villavicencio, Sentencia que fue confirmada por el Tribunal de
alzada, misma que se encuentra ejecutoriada, con lo que se puede evidenciar que la junta vecinal
“Primero de Mayo” no tiene mejor derecho propietario; 2) El procedimiento administrativo para
la aprobación de proyectos de urbanización se encuentra previsto en el art. 8 del Reglamento
para Urbanizaciones y Subdivisiones (RUS) aprobado mediante OM 52/2006 de 7 de diciembre
y complementado mediante las OOMM 55/2007 y 58/2007, por lo que de acuerdo a la
documentación se puede evidenciar que las instancias técnicas del Gobierno Municipal
cumplieron a cabalidad con las disposiciones y requisitos como son: El de exigir documento de
solicitud debidamente detallado y firmado por el propietario, título de propiedad de terreno,
certificado alodial actualizado, recibo de pago de impuestos al día, de acuerdo al art. 41 del
RUS, la cual posteriormente es remitida a consideración de la Comisión Asesora del
Reglamento para Urbanizaciones y Subdivisiones de la ciudad de Trinidad “CARUS” para la
revisión de los ante proyectos y proyectos finales de urbanización, emitiendo un informe de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1188
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

aprobación técnico legal; el cual es puesto a consideración del Concejo de Planificación Urbana
(CPU). Posteriormente se emite la Resolución Administrativa, y se envía ante el Concejo
Municipal para su revisión y aprobación mediante ordenanza municipal correspondiente; 3) Los
accionantes dentro de su prueba documental presentaron el testimonio 105/2011 de 23 de
agosto, de escritura pública de transferencia de inmueble con pacto de rescate que suscribió Juan
Gustavo del Águila Mejía en representación de Ana María del Águila Álvarez, con poder
notarial 73/88 de 14 de diciembre de “1998” como vendedor a Yolanda Semo Suárez, Giovana
Arce Mapatoto, Sonia Tamo Yubanure, Eduardo Maza Iba, Presidenta, Vicepresidenta,
Secretaria General, Secretario de Actas y otros miembros del directorio de la junta vecinal
“Primero de Mayo” registrado en DD.RR. bajo la matrícula computarizada 8.01.1.01.1.000462
Asiento 2 de 20 de octubre de 2011, posterior a la fecha de la OM 14/ 2011 de 12 de mayo, que
aprobó la urbanización “San Luis”. Asimismo, el registro de transferencia de inmueble con
pacto de rescate se realizó incumpliendo con los requisitos para la inscripción de inmueble en
dicha institución, toda vez, que primero debió ingresar por el municipio para la transferencia y
uso de suelo a la Dirección de Planificación Urbana, luego a la Dirección de Registro Urbano
para el registro de la propiedad, codificación catastral y pago de impuestos municipales a la
transferencia (IMT), concluido ese trámite el propietario llevó toda la documentación al notario
de fe pública para la protocolización de la misma y finalmente llevar a la oficina de DD.RR.
para su registro a efecto de lo previsto por el art. 1538.II del Código Civil (CC), procedimiento
que fue obviado permitiendo ese registro irregular; 4) Por los aspectos técnicos y legales
señalados precedentemente, se demuestra claramente que el Gobierno Municipal de la Santísima
Trinidad, ha cumplido con los procedimientos establecidos por el Reglamento para la
aprobación de Urbanizaciones y Subdivisiones de la ciudad de la Santísima Trinidad, aprobado
mediante OM 52/2006 de 7 de diciembre, por lo que no se ha vulnerado los derechos
constitucionales de la junta de vecinos “Primero de Mayo”, ya que por la prueba documental de
cargo y descargo se evidencia que los accionantes no han demostrado haber realizado
representación alguna que demuestre mejor derecho propietario dentro del proceso de
aprobación de la urbanización “San Luis” y fue después de aprobado el mismo que los
accionantes interpusieron recurso de reconsideración ante el Concejo Municipal alegando mejor
derecho propietario, presentando como prueba la ya señalada Resolución 62/10, dictada dentro
del proceso sumario de reivindicación, acción negatoria, anulabilidad de contrato más daños y
perjuicios y reconvención por acción negatoria y mejor derecho propietario, declarada
improbada tanto para los demandantes como para los reconvencionistas. Recurso de
reconsideración que se trató en sesión ordinaria, mismo que por unanimidad del Pleno fue
rechazado; y, 5) La OM 14/2011 de 12 de mayo, fue impugnada a petición de parte dentro del
plazo establecido en el art. 22 de la Ley de Municipalidades (LM) y reconsiderada en sesión
ordinaria de 17 de mayo de 2011, siendo ratificada en su totalidad al no haberse aportado ningún
otro elemento técnico ni legal, Resolución que fue comunicada a los impetrantes. Posteriormente
de haber transcurrido 6 meses la junta vecinal ”Primero de Mayo” volvió a presentar ante el
Concejo Municipal la reconsideración de la ordenanza en cuestión, pese a que no existe la figura
de re-reconsideración y a pesar de que el plazo se encontraba superabundantemente vencido, el
Pleno del Concejo Municipal con la mejor predisposición de atender todo requerimiento de los
vecinos obvió lo anteriormente mencionado y atendió por segunda vez el pedido de
reconsideración, siendo denegado por no aportar mayores elementos jurídicos ni técnicos,
rechazo que se hizo al amparo del art. 61 inc. c) del ordenamiento jurídico y administrativo del
Gobierno Municipal de la Santísima Trinidad de 16 de agosto de 2011, Resolución que fue
puesta en conocimiento de la parte interesada mediante nota de 4 de noviembre de 2011 y
recepcionada el 7 del mismo mes y año, teniendo los impetrantes la vía del Recurso de Control
de Legalidad, el mismo que nunca fue interpuesto por ninguna persona, peor aún por los
recurrentes accionantes, por lo que no se agotaron las instancias administrativas y que es

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1189


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

requisito sinequanon para poder abrir la vía del recurso extraordinario como es la acción de
amparo constitucional, señalando la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre.

Por su parte los codemandados José Luis Aguilera Villavicencio y María Luisa Aguilera
Villavicencio, presentaron informe escrito cursante de fs. 203 a 207, señalando: i) El art. 74.2 de
la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP), establece que “La acción de amparo
no procederá”: …contra los actos consentidos libre y expresamente…” y si se considera que la
Ordenanza Municipal que impugnan data de 12 de mayo de 2011 y su reconsideración en
aplicación del art. 22 de la LM fue presentada el 1 de noviembre de igual año, cinco meses y
veinte días. Hasta ese momento, los accionantes han consentido los actos de manera libre,
debido a que si bien la acción de amparo constitucional puede interponerse dentro de los seis
meses, empero lo presentado en dicha fecha ha sido un medio de impugnación denominado
reconsideración. Esto significa que durante todo ese tiempo a existido una dejadez e inactividad
que no puede reconocerse a los efectos de la tutela solicitada (señalando la SC 1369/2001-R de
30 de septiembre); ii) Se constata que los accionantes al presentar su reconsideración de forma
extemporánea después de casi seis meses de haberse dictado la Ordenanza Municipal hoy
impugnada, ha incurrido en lo referido en la Sentencia Constitucional indicada líneas arriba,
analizada como presentación extemporánea, por ello, constatado con el principio de inmediatez,
el cómputo del plazo para la caducidad de la acción comenzó a correr a partir del 12 de mayo de
2011, y no a partir del 5 de noviembre de igual año, habiendo caducado el 13 de noviembre del
mismo mes y año, por lo cual al tenor del art. 74.5 de la (LTCP), se torna improcedente la acción
de amparo constitucional; y iii) Respecto a los derechos que supuestamente fueron vulnerados a
los accionantes, en su memorial no señalaron ni fundamentaron en qué medida fueron
vulnerados restringidos, por lo que al no precisarse los mismos, corresponde que el presente
acción de amparo sea denegada.

I.2.3. Resolución

La Sala Civil del Tribunal Departamental de Justicia del Beni, constituida en Tribunal de
garantías, por Resolución 002/2012 de 27 de enero, cursante de fs. 289 a 290, denegó la acción
de amparo constitucional, sin costas, fundamentando la misma en los siguientes puntos: a) Una
vez presentados los informes de las autoridades y personas particulares demandadas, los
accionantes a través de la prueba adjunta y la exhibida en audiencia, no aportaron mayores
elementos de convicción respecto a la afectación de los terrenos de su propiedad y por la que
sustentan su acción de amparo constitucional; b) En la propia documentación acompañada a la
acción de amparo constitucional -fotocopias legalizadas del proceso de reivindicación seguida
por los hermanos Aguilera Villavicencio- señaló en hechos no probados en el Punto 1 que la
superficie del terreno transferida por Juan Gustavo del Águila Mejía a favor de la junta vecinal
”Primero de Mayo”, afectó la cantidad de 79.800 m2 2 de los hermanos Aguilera Villavicencio ;
c) No se ha adjuntado a la presente la acción, algún informe pericial y/o técnico sobre las partes
afectadas por la Ordenanza Municipal ó que hayan sido objeto de venta y/o despojo por los
hermanos Aguilera Villavicencio; d) Que el derecho propietario que invocan los accionantes
sobre los terrenos, se encuentran controvertidos y no han sido objeto de definición o
reconocimiento pleno por la autoridad legal competente, según los documentos adjuntos a la
acción; e) De acuerdo a lo expuesto y acreditado en audiencia, el recurso de reconsideración del
que fue objeto previo la Ordenanza Municipal, sería un segundo recurso; pues en fecha anterior
ya se habría presentado contra dicha ordenanza, un primer recurso de reconsideración. Por lo
que, la presente acción, estaría fuera del plazo de los seis meses que previene el art. 59 de la
LTCP (AC 075/2010-RCA de 9 de junio y la SC 0425/2010-R de 28 de junio); f) Conforme a lo
que dispone el art. 66 inc. a), en relación de los arts. 57 y 61. c) de la Ley 001/11 de 16 de
agosto, aprobada por el Gobierno Autónomo Municipal de la Santísima Trinidad, una vez
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1190
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

negado el recurso de reconsideración contra la Ordenanza Municipal que aprobó la urbanización


“San Luis”, las partes afectadas pudieron interponer contra dicha negativa el recurso de control
de legalidad. Al haberse agotado la instancia administrativa previa la acción, según los términos
señalados en el art. 74.2 y 3 de la LTCP, resulta improcedente (actos consentidos, resoluciones
que pueden ser modificadas por otro recurso aun no se lo haya interpuesto); y, g) Conforme al
art. 5 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, se presume la constitucionalidad de
esta ley. Por consiguiente. 1) La ausencia de elementos probatorios plenos, respecto de los
hechos, objeto de la acción, 2) El derecho propietario controvertido que sustenta la misma, 3) La
extemporaneidad de la acción; y/o, 4) la falta de agotamiento previo de la instancia
administrativa, impide se ingrese al fondo de la litis y otorgar la tutela requerida.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. El 25 de noviembre de 2005, el Prefecto y Comandante del departamento del Beni, Carlos
Navia Ribera, mediante Resolución Prefectural 187/2005, autorizó el registro de la personalidad
jurídica a la junta vecinal ”Primero de Mayo” (fs. 1 a 2).

II.2. Por Resolución 62/10, dentro del proceso sumario de reivindicación, acción negatoria,
anulabilidad de contrato más daños y perjuicios y reconvención por acción negatoria y mejor
derecho propietario seguido por José Luis Aguilera Villavicencio, María Luisa Aguilera
Villavicencio y Aida Mery Aguilera Villavicencio contra Juan Gustavo del Águila Mejía,
Yolanda Semo Suárez, Yobana Yumacale Manu, Ramón Mosua Méndez y Raúl Melgar
Guasase, el Juzgado de Instrucción Tercero en lo Civil de Trinidad declaró: i) Improbada la
demanda de acción reivindicatoria, acción negatoria, anulabilidad de contrato más daños y
perjuicios; y, ii) Improbada la demanda reconvencional de acción negatoria y mejor derecho
propietario, interpuesta por Juan Gustavo del Águila Mejía, Yolanda Semo Suárez, Yobana
Yumacale Manu, Ramón Mosua Méndez y Raúl Melgar Guasase contra los hermanos José Luis,
María Luisa y Aida Mery, todos Aguilera Villavicencio, sin costas por ser juicio doble (fs. 12 a
16 vta.).

II.3. Por Auto de Vista 04/2011 dentro de la apelación interpuesta por los hermanos Aguilera
Villavicencio, el Juez de Partido Segundo en lo Civil y Comercial de Trinidad, resolvió
confirmar en todas sus partes la Resolución 62/10, procediéndose con la notificación el 1 de
marzo del mismo año (fs.17 a 20 vta.).

II.4. El 10 de marzo de 2011, mediante memorial dirigido al Juez Segundo de Partido en lo Civil
y Comercial, Yolanda Semo Suárez, invocó se declare ejecutoria del Auto de Vista 04/2011 y
mediante proveído de 14 del mismo mes y año, al no existir recurso de impugnación posterior, la
autoridad judicial en observancia del art. 515 del CPC, declaró ejecutoriado dicho Auto (fs.21 y
vta.).

II.5. El 16 de marzo de 2011, por nota dirigida al Alcalde Municipal de la ciudad de la


Santísima Trinidad Moisés Shriqui Vejarano, la Mesa Directiva de la junta vecinal ”Primero de
Mayo” solicitó que el trámite relativo a la presunta urbanización “San Luis” sea anulado, se deje
sin efecto y archivada, toda vez que los terrenos en cuestión son de propiedad de dicha junta
vecinal. (fs. 7 a 8)

II.6. El 25 de abril de 2011, por nota dirigida a la Presidenta y miembros del Concejo Municipal
de la ciudad de la Santísima Trinidad, la junta vecinal ”Primero de Mayo” ante la solicitud de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1191
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

aprobación de la urbanización “San Luis”, denunció que el mismo sobrepone la jurisdicción y el


derecho propietario de dicha Junta, por lo que solicitaron se les franquee fotocopias simples y
legalizadas de las piezas principales sobre esa urbanización, como la documentación que fue
presentada por los hermanos Aguilera Villavicencio (fs. 9 a 10)

II.7. El 5 de mayo de 2011, mediante nota presentada por el Presidente de la Comisión Técnica
de Planificación y Desarrollo Territorial, como de la Comisión Jurídica, presentaron a la
Presidenta del Concejo Municipal el informe de aprobación de la urbanización “San Luis” (fs.
44 a 46).

II.8. El 12 de mayo de 2011, por OM 14/2011, se aprobó la Urbanización “San Luis”, con una
superficie de 215.421.72 m2 de acuerdo a las normas legales y técnicas, como la Resolución
Urbana CPU 7/2010 de 26 de septiembre de 2010, de propiedad de María Luisa, José Luis y
Aida Mery Aguilera Villavicencio (fs. 41 a 42)

II.9. El 10 de junio de 2011, mediante memorial dirigido al Jefe del Sistema de Distribución de
ENDE-Trinidad, los miembros de la Mesa Directiva “Primero de Mayo” solicitaron rechazar el
memorial que fue presentado por los Hermanos Aguilera Villavicencio, mediante la cual pedían
no se dé curso a la solicitud de instalación de energía eléctrica (fs. 11 y vta.).

II.10. Los hermanos José Luis, María Luisa y Aida Mery, todos Aguilera Villavicencio, por
testimonio 297/2011 de 27 de junio, presentaron escritura de complementación sobre cambio de
uso de suelo y superficie de terreno, que: colinda al norte con terrenos de propiedad de Sebastián
Paz Quaino, al sur con los terrenos de Fernando Parada Parada y Consuelo Arriaza Eguez de
Parada, en la zona oeste con la av. Gran Paititi, ratificando en todo lo demás el contenido de la
escritura pública 423/2009 siendo la superficie del inmueble 239.700.00 m2, debidamente
registrado en DD.RR. en el folio 8.01.1.01.0013831 del 9 de julio de 2011 (fs. 179 a 184).

II.11. El 23 de agosto de 2011, a través del testimonio 105/2011 otorgado ante la Notaria de Fe
Pública, de Miriam Durán Aue, se procedió a la transferencia de inmueble con pacto de rescate
entre Juan Gustavo del Águila Mejía en representación legal de Ana María del Águila Álvarez
con poder notarial 73/88 de 14 de diciembre en su condición de vendedor y por otra Yolanda
Semo Suárez, Giovana Arce Mapatoto, Sonia Tamo Yubanure, Eduardo Maza Iba, Mercedes
Durán Aguilera, Diana Salvatierra González y Florencio Durán Aguilera, todos miembros del
directorio y representantes legales de la junta vecinal ”Primero de Mayo” compradoras (fs. 23 a
28).

II.12. El 1 de noviembre de 2011, por memorial dirigido a la Presidenta del Concejo Municipal
de la Santísima Trinidad, Yolanda Semo Suárez, Florencio Durán Aguilera y Eduardo Maza Iba,
en calidad de Presidenta, Secretario de hacienda y Actas de la junta vecinal ”Primero de Mayo”
solicitaron reconsideración de la OM 14/2011 de 12 de mayo de 2011 (fs. 37 a 39) y el 4 de
noviembre del mismo año, mediante nota 380/11 la Presidenta y Secretario del Concejo
Municipal de la Santísima Trinidad, respondieron que por voto oral y nominal unánime de los
Concejales se denegó la reconsideración (fs. 37 a 40).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes consideran que las autoridades demandas y particulares han vulnerado sus
derechos a un hábitat y vivienda adecuada que dignifiquen su vida familiar y comunitaria, a los
servicios básicos y a la propiedad privada; toda vez que: a) Pese haber sido alertados sobre el
conflicto del derecho de propiedad de terrenos, mediante OM 14/2011 de 12 de mayo, aprobaron
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1192
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

la urbanización “San Luis” de propiedad de los hermanos Aguilera Villavicencio, en desmedro


de la junta vecinal “Primero de Mayo, sobreponiéndose en un cien por ciento a los terrenos
legítimamente adquiridos por dicha junta; y, b) En consecuencia y con la finalidad de que el
Concejo Municipal de la Santísima Trinidad, analice el daño causado, presentaron la
reconsideración de dicha Ordenanza, la misma que fue rechazada. En consecuencia corresponde
analizar si el problema jurídico planteado puede ser analizado vía acción de amparo
constitucional.

III.1. La acción de amparo constitucional y su naturaleza subsidiaria

Al respecto, el Tribunal Constitucional, mediante la SC 0274/2011-R de 29 de marzo, estableció


que: "La acción de amparo constitucional, de acuerdo a los arts. 128 y 129.I de la CPE, tendrá
lugar: '…contra los actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de
persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman, o amenacen restringir o suprimir los
derechos reconocidos por la Constitución y la ley' y '…siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos,
suprimidos o amenazados'; disposiciones que expresamente establecen que las supuestas
lesiones a los derechos fundamentales y garantías constitucionales deben ser reparadas en la
jurisdicción ordinaria, y sólo en defecto de ésta, de ser evidente la lesión al derecho invocado e
irreparable el daño emergente de la acción u omisión o de la amenaza de restricción de los
derechos, se acuda a la jurisdicción constitucional.

Este Tribunal, a través de su uniforme jurisprudencia, ha desarrollado el carácter subsidiario


del amparo constitucional, señalando que: '...no podrá ser interpuesta esta acción
extraordinaria, mientras no se haya hecho uso de los recursos ordinarios o administrativos y,
en caso de haber utilizado los mismos deberán ser agotados dentro de ese proceso o vía legal,
sea judicial o administrativa, salvo que la restricción o supresión de los derechos y garantías
constitucionales ocasione perjuicio irremediable e irreparable' (SSCC 1089/2003-R,
0552/2003-R, 0106/2003-R, 0374/2002-R, 1337/2003-R, entre otras)” (las negrillas son
nuestras).

Siguiendo ese razonamiento, la SC 1580/2011-R de 11 de octubre, estableció las siguientes


reglas y subreglas de improcedencia de la acción de amparo por subsidiariedad, cuando: “…1)
Las autoridades judiciales o administrativas no han tenido la posibilidad de pronunciarse
sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un medio de defensa ni ha planteado recurso
alguno, así: a) Cuando en su oportunidad y en plazo legal no se planteó un recurso o medio
de impugnación; y, b) Cuando no se utilizó un medio de defensa previsto en el ordenamiento
jurídico; y, 2) Las autoridades judiciales o administrativas pudieron haber tenido o tienen la
posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos y medios de defensa, así: a)
Cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se daría en casos de
planteamientos extemporáneos o equivocados; y, b) Cuando se utilizó un medio de defensa útil y
procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo no se agotó, estando al
momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de resolución. Ambos casos,
se excluyen de la excepción al principio de subsidiaridad, que se da cuando la restricción o
supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados, ocasionen perjuicio
irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional, procede la tutela
demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de resolución'" (las
negrillas son nuestras).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1193


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III.2. Hechos controvertidos o el reconocimiento de derechos no pueden ser dilucidados


por la jurisdicción constitucional

Conforme la naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional, cual es tutelar derechos


que hubieren sido lesionados por actos u omisiones ilegales o indebidas de autoridades o
personas particulares, en ese entendido no puede ingresar a dilucidar hechos controvertidos ni
reconocer derechos; así la SC 0675/2011-R de 16 de mayo, recogiendo la uniforme
jurisprudencia, indicó:“'…el recurso de amparo constitucional es un mecanismo instrumental
para la protección del goce efectivo de los derechos fundamentales por parte de las personas,
por tanto protege dichos derechos cuando se encuentran consolidados a favor del actor del
amparo, no siendo la vía adecuada para dirimir supuestos derechos que se encuentren
controvertidos o que no se encuentren consolidados, porque dependen para su consolidación
de la dilucidación de cuestiones de hecho o de la resolución de una controversia sobre los
hechos; porque de analizar dichas cuestiones importaría el reconocimiento de derechos por
vía del recurso de amparo, lo que no corresponde a su ámbito de protección, sino sólo la
protección de los mismos cuando están consolidados; por ello, la doctrina emergente de la
jurisprudencia de este Tribunal Constitucional, también ha expresado que el recurso de amparo
no puede ingresar a valorar y analizar hechos controvertidos;(…) '(...) el ámbito del amparo
constitucional como garantía de derechos fundamentales, no alcanza a definir derechos ni
analizar hechos controvertidos, pues esto corresponderá -de acuerdo al caso- a la jurisdicción
judicial ordinaria o administrativa, cuyos jueces, tribunales o autoridades de acuerdo a la
materia, son las facultadas para conocer conforme a sus atribuciones específicas las cuestiones
de hecho. En este sentido, la función específica de este Tribunal, en cuanto a derechos
fundamentales, sólo se circunscribe a verificar ante la denuncia del agraviado, si se ha
incurrido en el acto ilegal u omisión indebida y si ésta constituye amenaza, restricción o
supresión a derechos fundamentales' .

Del razonamiento expuesto, se concluye que el recurrente, ahora accionante, al presentar la


acción tutelar debe acompañar los elementos probatorios suficientes que comprueben la
titularidad de los derechos que reclama como vulnerados, pues si el Tribunal no tiene certeza
sobre la veracidad de los hechos expuestos por encontrarse en controversia, no puede
pronunciarse sobre el fondo del asunto por no constituir una instancia de resolución de
causas ordinarias, correspondiendo sólo la protección de derechos consolidados a favor del
accionante” (las negrillas son nuestras).

De donde se extrae, que la resolución de hechos controvertidos o el reconocimiento de derechos,


delimita la competencia de la jurisdicción constitucional.

III.3. Análisis del caso de autos

En el presente caso, los accionantes alegan la vulneración de sus derechos a un hábitat y


vivienda adecuada que dignifiquen su vida familiar y comunitaria, a los servicios básicos y a la
propiedad privada; toda vez, que las autoridades y personas demandadas a pesar de haber sido
alertadas sobre el conflicto del derecho de propiedad de terrenos, mediante OM 14/2011
aprobaron la urbanización “San Luis” de propiedad de los hermanos Aguilera Villavicencio, en
desmedro de la junta vecinal ”Primero de Mayo”, sobreponiéndose a los terrenos legítimamente
adquiridos, en consecuencia y con la finalidad de que el Concejo Municipal de la Santísima
Trinidad, analice el daño causado, presentaron la reconsideración de dicha Ordenanza, la misma
que fue rechazada.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1194


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Ahora bien, de la revisión de los antecedentes y pruebas documentales de cargo adjunta a la


presente acción de amparo constitucional, se evidencia que la junta vecinal, el 4 de mayo de
2011, suscribió una minuta de transferencia de inmueble con pacto de rescate con Gustavo del
Águila Mejía, apoderado legal de Ana María del Águila Álvarez, por la superficie de 18 ha., la
misma que después de ser protocolizada por testimonio 105/2011 de 23 de agosto, fue registrada
en DD.RR. el 29 de octubre de 2011. Sin embargo, los accionantes manifiestan que la familia
Aguilera Villavicencio, interpuso demanda sumaria de anulabilidad de documento de
transferencia, acción reivindicatoria, acción negatoria de derechos y pago de daños y perjuicios,
la misma que de acuerdo a la Resolución 62/10, fue declarada improbada tanto para los
demandantes como para los reconvencionistas en primera instancia y confirmada ante el
Juzgado Segundo de Partido en lo Civil y Comercial mediante Auto de Vista 042/2011 y
ejecutoriada el 14 de marzo de 2011. Siendo así, que los hermanos Aguilera Villavicencio,
cumpliendo con el procedimiento administrativo y técnico de proyectos de urbanización del
municipio de la Santísima Trinidad, -previsto en el art. 8 del RUS aprobado mediante Ordenanza
Municipal 52/2006 de 7 de diciembre y complementado mediante las OOMM 55/2007 y
58/2007, como la Resolución Urbana CPU 7/2010, lograron obtener la OM 14/2011, por el que
se aprobó la urbanización “San Luis”.

Ante esta situación, los hoy accionantes el 1 de noviembre de 2011, por memorial presentado
ante el Concejo Municipal, solicitaron la reconsideración de la OM 14/2011 y mediante nota
380/11, fueron respondidos que por voto oral, nominal y unánime de los concejales se resolvió
denegar la reconsideración. Asimismo, de acuerdo a su petitorio dentro de la presente acción de
amparo constitucional solicitaron se disponga dejar sin efecto dicha Ordenanza Municipal, hasta
que entre la junta vecinal ”Primero de Mayo” y los hermanos Aguilera Villavicencio, se defina
el mejor derecho de propiedad y se abstengan de ejercer algún acto de disposición de las tierras
hoy en disputa.

Bajo esos antecedentes, la naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional se


circunscribe a tutelar derechos, cuya vulneración hubiere sido consolidada a través de un acto
ilegal u omisión indebida por parte de un servidor público o una persona particular. Así la
jurisprudencia constitucional, precisó de manera clara y concreta que el presente medio de
defensa no puede ser activado para dilucidar hechos controvertidos o reconocer derechos, que
contraríen su naturaleza jurídica, conforme se manifestó; los cuales deberán resolverse
previamente en la jurisdicción ordinaria o administrativa según corresponda, instancia a la cual
compete determinar cuestiones de hecho o de derecho. En consecuencia, la competencia de la
jurisdicción constitucional, se limita a verificar la existencia del acto ilegal u omisión indebida
que restrinja, suprima o amenace derechos fundamentales y garantías constitucionales, ya
consolidados o reconocidos.

En el caso concreto, se denota la existencia de hechos controvertidos, relativos al derecho


propietario, los cuales necesariamente deben ser aclarados o resueltos por la jurisdicción
administrativa, ordinaria (…) la jurisdicción constitucional no puede constituirse en una
instancia de resolución de cuestiones de hecho o de derecho, usurpando una atribución que le
compete única y exclusivamente a la jurisdicción ordinaria.

En ese entendido, corresponde denegar la tutela invocada, sin ingresar al análisis de fondo del
problema jurídico planteado, en función a que la jurisdicción constitucional a través del presente
medio de defensa no puede constituirse en una instancia de resolución de cuestiones de hecho o
de derecho, usurpando una atribución que le compete única y exclusivamente a la jurisdicción
ordinaria.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1195


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por lo expresado precedentemente, la situación planteada no se encuentra dentro las previsiones


y alcances de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías al haber
denegado la acción, ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales y dio
correcta aplicación a esta acción tutelar.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
en revisión, resuelve: APROBAR la Resolución 002/2012 de 27 de enero, cursante de fs. 289 a
290, pronunciada por la Sala Civil del Tribunal Departamental de Justicia del Beni, y en
consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada, sin ingresar al análisis de fondo.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani-Magistrado


Dra. Mirtha Camacho Quiroga-Magistrada
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0146/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relator: Dr. Gualberto Cusi Mamani
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00081-2012-01-ACC
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución 1/2012 de 9 de febrero, cursante de fs. 27 a 30, pronunciada dentro de


la acción de amparo constitucional interpuesta por Juan Callata Coa, Dirigente de la
Comunidad de Isluco contra Manuel Lizarazu Yance, Juez Agroambiental de Uncía del
departamento de Potosí.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 7 de febrero de 2012, cursante de fs. 8 a 13 vta., el accionante


expone los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 24 de “enero” de 2011, dentro de la diligencia previa de conciliación seguida a instancia de


las autoridades de Maracuri contra sus similares de Isluco, se suscribió un acta de conciliación
entre ambas comunidades sobre el uso del agua; sin embargo, los originarios de Maracuri,
restringen el uso de la misma desconociendo los principios de solidaridad y reciprocidad, los
cuales orientan que dichas comunidades cumplan y respeten lo acordado, no obstante que el
agua nace en Isluco y el uso y aprovechamiento del mismo fue compartido en beneficio de todos
los habitantes.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1196
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Refiere que el acta de conciliación fue suscrita por ex autoridades, quienes carecían de
legitimación para intervenir en dicho acuerdo a nombre de la comunidad de Isluco, por
consiguiente, su participación fue nula e ineficaz; no obstante, el Juez Agroambiental,
transgrediendo los principios de legalidad y seguridad jurídica, permitió esa participación; ante
lo cual, por memorial de 25 de enero de 2012, se acudió al Juez ahora demandado para que
anule judicialmente el acta de 24 de febrero de 2011; empero, su pretensión fue rechazada por
Auto de 26 de enero de 2012, con el fundamento que “el acuerdo conciliatorio, cuenta con nueve
firmas de las autoridades de ambas comunidades y los abogados de ambas partes, el suscrito
juzgador y la sra. secretaria y que, (…) el referido acuerdo conciliatorio fue homologado por el
Juez reiterando que tiene calidad de cosa juzgada material” (sic).

Finalmente señala que, por disposición del art. 78 de la Ley del Servicio Nacional de Reforma
Agraria (LSNRA), la demanda de anulación del acuerdo conciliatorio debió admitirse y
declararse probada; al no haber procedido de esa manera, la autoridad demandada vulneró los
“derechos de la Comunidad” a la cual representa.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante, a nombre de la comunidad de Isluco y de su persona, alega la vulneración de los


derechos a ser “oído”, a la igualdad procesal, la protección judicial, al agua, la salud y la vida,
citando al efecto los arts. 13.I, 15.I, 16.I, 18.I y 120 de la Constitución Política del Estado
(CPE).

I.1.3. Petitorio

Con dichos antecedentes, solicita se declare “procedente” la acción de amparo constitucional y


en consecuencia se disponga la anulación del Auto de 26 de enero de 2012, prosiguiendo el
trámite de demanda de nulidad del acta de conciliación de 24 de “enero” de 2011.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Realizada la audiencia pública de consideración de la acción de amparo Constitucional, el 9 de


febrero de 2012, en presencia única del accionante, según consta en el acta cursante a fs. 26 y
vta., se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El accionante ratificó en forma íntegra el contenido de la demanda.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Manuel Lizarazu Yance, Juez Agroambiental de Uncía del departamento de Potosí, en el


informe escrito cursante a fs. 41 y vta., señaló: a) El 24 de febrero de 2011, firmaron el acta de
conciliación ex autoridades de la comunidad Isluco, por lo que no conculcó derecho alguno, en
todo caso, quienes debieron observar si las autoridades eran actuales o pasadas eran las
autoridades de Maracuri; b) Como autoridad que dictó la Resolución, no puede revisar sus
propios actos, “el ahora recurrente debió utilizar el recurso que correspondía y apelar el Auto de
26 de enero de 2012” (sic), toda vez que tenía la posibilidad de plantear un recurso ordinario; c)
La audiencia de conciliación se realizó el 24 de febrero de 2011 y no así, el 24 de “enero”, como
señala el memorial de demanda, por lo que el acto lesivo demandado no habría ocurrido y menos
participó el accionante; d) La cuestionada Resolución, no contiene las características de un
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1197
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

contrato civil, lo cual hace inaplicable aunque supletoriamente el art. 546 del Código Civil (CC);
e) La presente acción no es de aplicación sustitutiva de otros recursos por lo que podría haber
recurrido ante el Tribunal Agroambiental en el plazo de ley; f) “No puede revisar o anular sus
propios actos, salvo en el caso de procedimiento civil con referencia al recurso de reposición,
habiendo advertido la comisión de algún error” (sic); y, g) El accionante tuvo la oportunidad de
interponer recurso de casación o nulidad contra el referido Auto, conforme al art. 87 de la
LSNRA.

I.2.3. Resolución

El Juez de Partido Mixto Liquidador y de Sentencia de Colquechaca del Tribunal Departamental


de Justicia de Potosí, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 1/2012 de 9 de
febrero, cursante de fs. 27 a 30, por la que denegó la acción de amparo constitucional, con
costas al accionante, bajo los siguientes fundamentos: 1) La Resolución de 26 de enero de 2012,
por la cual el Juez demandado rechazó la solicitud de nulidad del acta de conciliación de 24 de
febrero de 2011, alegando que dicho acuerdo tenía calidad de cosa juzgada, al ser un auto
definitivo podía ser impugnado mediante recurso de casación o nulidad ante el Tribunal
Agroambiental, conforme al art. 87 de la LSNRA, que debió ser interpuesto en el plazo previsto
o, en su caso, dentro de seis meses, recurrir ante la jurisdicción constitucional, aspectos no
cumplidos por el accionante; 2) La acción de amparo constitucional es de carácter subsidiario,
no forma parte de los procedimientos ordinarios, ni es sustitutivo de otros medios o recursos
legales; y, 3) Al no haber admitido la demanda el Juez Agroambiental de Uncía, que pretendía
invalidar un acta de conciliación que tiene calidad de cosa juzgada, ha dado estricto
cumplimiento a lo dispuesto por los arts. 181.4 y 515.2 del Código de Procedimiento Civil
(CPC), sin lesionar derecho alguno ni transgredir las normas referidas.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en el cuaderno procesal, se concluye


lo siguiente:

II.1. Por acta de audiencia pública de conciliación de 24 de febrero de 2011, las comunidades de
Isluco y Maracuri, acordaron -entre otros puntos- el uso solidario del agua entre ambas
comunidades (fs. 1 a 2 vta.).

II.2. Cursa a fs. 4, el acta de reorganización de 15 de noviembre de 2011, que registra la


elección de autoridades sindicales de la comunidad de Isluco para la gestión 2012.

II.3. Por memorial de 25 de enero 2012, presentado por el ahora accionante, en representación
de la Comunidad Isluco, ante el Juez “Agrario”, se interpuso “demanda de nulidad de acuerdo
conciliatorio” (sic) referido al acta de 24 de febrero de 2011, cuestionando la validez de la
participación de las autoridades de la referida Comunidad en la firma del señalado documento
(fs. 6 y vta.).

II.4. El Juez Agroambiental de Uncía, ahora demandado, por Auto de 26 de enero de 2012,
respecto al memorial descrito en la conclusión anterior, se pronunció indicando que no
corresponde lo solicitado, con el fundamento que al haber sido suscrito por las autoridades de
ambas comunidades, los abogados de las partes, el Juez y la Secretaria, este documento adquirió
calidad de cosa juzgada material, conforme dispone el art. 181.4 del CPC.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1198


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante alega la vulneración de sus derechos y los de la comunidad de Isluco a la que


representa a la igualdad, a ser oídos, a la protección judicial, a la vida y al agua, por cuanto el
Juez ahora demandado, no quiso tramitar la solicitud de nulidad de un acuerdo conciliatorio
sobre el uso del agua suscrito entre la Comunidad que representa y la de Maracuri, señalando
que este documento adquirió calidad de cosa juzgada, cuando más bien carece de validez, al
haber sido suscrito por ex autoridades que no tenían legitimidad y legalidad, siendo utilizado por
la Comunidad de Maracuri para restringirles el uso del agua. En consecuencia, corresponde
determinar si los hechos demandados son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela
solicitada.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

El art. 128 de la CPE, ha instituido la acción de amparo constitucional, como una acción tutelar
de defensa contra actos u omisiones ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona
individual o colectiva, que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos
reconocidos por la misma Constitución y la ley. Acorde esta precisión constitucional, se advierte
el contenido del art. 73 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (LTCP).

En ese sentido, esta acción tutelar puede ser presentada por la persona “…que se crea afectada,
por otra a su nombre con poder suficiente o por la autoridad correspondiente de acuerdo con la
Constitución, ante cualquier juez o tribunal competente, siempre que no exista otro medio o
recurso legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados” (art. 129.I de la CPE).

III.2. La subsidiariedad de la acción de amparo constitucional

La SC 0413/2011-R de 14 abril señala que: “La acción de amparo constitucional, conforme lo


previsto en los arts. 128 y 129.I de la CPE, tendrá lugar: '…contra los actos u omisiones
ilegales o indebidos de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que
restrinjan, supriman, o amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la
Constitución y la Ley' y '…siempre que no exista otro medio o recurso legal para la protección
inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o amenazados'; disposiciones
que expresamente establecen que las supuestas lesiones a los derechos fundamentales y
garantías constitucionales deben ser reparadas en la jurisdicción ordinaria, y sólo en defecto de
ésta, de ser evidente la lesión al derecho invocado e irreparable el daño emergente de la acción
u omisión o de la amenaza de restricción de los derechos, se otorgue la jurisdicción
constitucional.

Este Tribunal, a través de su uniforme jurisprudencia, ha desarrollado el carácter subsidiario


del amparo constitucional, señalando que: '...no podrá ser interpuesta esta acción
extraordinaria, mientras no se haya hecho uso de los recursos ordinarios o administrativos y,
en caso de haber utilizado los mismos deberán ser agotados dentro de ese proceso o vía legal,
sea judicial o administrativa, salvo que la restricción o supresión de los derechos y garantías
constitucionales ocasione perjuicio irremediable e irreparable' (SSCC 0374/2002-R, 0106/2003-
R, 0552/2003-R, 1089/2003-R, 1337/2003-R, entre otras).

Siguiendo ese razonamiento, a través de la SC 1337/2003-R de 15 de septiembre, refiriéndose a


la subsidiariedad, se señalaron las siguientes sub reglas, al señalar que el amparo será
improcedente, cuando: '…1) Las autoridades judiciales o administrativas no han tenido la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1199
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

posibilidad de pronunciarse sobre un asunto porque la parte no ha utilizado un medio de


defensa ni ha planteado recurso alguno, así: a) Cuando en su oportunidad y en plazo legal no
se planteó un recurso o medio de impugnación; y, b) Cuando no se utilizó un medio de
defensa previsto en el ordenamiento jurídico; y, 2) Las autoridades judiciales o administrativas
pudieron haber tenido o tienen la posibilidad de pronunciarse, porque la parte utilizó recursos
y medios de defensa, así: a) Cuando se planteó el recurso pero de manera incorrecta, que se
daría en casos de planteamientos extemporáneos o equivocados; y, b) Cuando se utilizó un
medio de defensa útil y procedente para la defensa de un derecho, pero en su trámite el mismo
no se agotó, estando al momento de la interposición y tramitación del amparo, pendiente de
resolución. Ambos casos, se excluyen de la excepción al principio de subsidiaridad, que se da
cuando la restricción o supresión de los derechos y garantías constitucionales denunciados,
ocasionen perjuicio irremediable e irreparable, en cuya situación y de manera excepcional,
procede la tutela demandada, aún existan otros medios de defensa y recursos pendientes de
resolución'” (las negrillas nos corresponden).

III.3. Análisis del caso concreto

De la compulsa de los antecedentes cursantes en el legajo procesal, se evidencia que el


accionante -en representación de la Comunidad Isluco- interpuso demanda de nulidad de un
acuerdo conciliatorio, suscrito entre la Comunidad que representa y la de Maracuri, alegando
como motivo de la nulidad que dicho documento habría sido firmado por ex autoridades,
quienes a su criterio, carecerían de legitimación a efectos de participar en representación de la
Comunidad; demanda que en conocimiento del Juez Agroambiental de Uncía, ahora demandado,
fue desestimada mediante Auto de 26 de enero de 2012, sin ingresar a mayores consideraciones
de orden legal, con el fundamento que no correspondía lo solicitado, porque el acuerdo
conciliatorio suscrito el 24 de febrero de 2011, adquirió calidad de sentencia y cosa juzgada
material, conforme el art. 181 inc. 4) del CPC.

De lo relacionado precedentemente, se evidencia que lo que se solicita a través del presente


amparo, es dejar sin efecto el Auto de 26 de enero de 2012 y se disponga el trámite posterior de
la demanda de nulidad del acta de conciliación de 24 de febrero de 2011; pretensión que empero,
no puede ser dilucidada a través de la presente acción de defensa, por cuanto el Auto ahora
impugnado, al tener carácter definitivo que corta todo procedimiento ulterior, tiene efectos de
una sentencia; en consecuencia, siendo que conforme al art. 78 de la LSNRA, en la materia rige
el régimen de supletoriedad para que los actos y procedimientos procesales no establecidos en
dicha Ley se rijan con el Código de Procedimiento Civil y constituyendo precisamente la
Resolución de 26 de enero de 2012 un Auto definitivo, éste bien pudo ser impugnado mediante
el recurso de casación previsto por el art. 87.I de la LSNRA, ante el Tribunal Agroambiental,
circunstancia que determina no se pueda ingresar al análisis de fondo de la problemática
planteada, por cuanto el accionante en su oportunidad no planteó un medio de impugnación
previsto por ley, más aún, si la naturaleza de la acción del amparo constitucional, por
prescripción de la propia Constitución Política del Estado, es subsidiaria; es decir, que para ser
activada, el agraviado previamente de manera inexcusable debe agotar cuantas instancias le
otorgue la ley. Aspecto que en el presente caso no acontece, debiéndose denegar la tutela por
dicho aspecto.

Por los fundamentos precedentemente expuestos, el Juez de garantías, al haber denegado la


tutela, no efectuó una adecuada compulsa de los antecedentes del caso y de los alcances de esta
acción de defensa.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1200


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda, en virtud a la autoridad que le


confieren la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la LTCP,
resuelve: APROBAR la Resolución 1/2012 de 9 de febrero, cursante de fs. 27 a 30, pronunciada
por el Juez de Partido Mixto Liquidador y de Sentencia de Colquechaca del Tribunal
Departamental de Justicia de Potosí; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani.-Magistrado.


Dra. Mirtha Camacho Quiroga.-Magistrada.
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0147/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00480-2012-01-AL
Departamento: Oruro

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

En revisión la Resolución 03/2012 de 17 de marzo, cursante de fs. 91 a 95 vta., pronunciada,


dentro de la acción de libertad interpuesta por Nelson Corani Álvarez contra Jacinto Aguilar
Llave, Fiscal de Materia.

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 16 de marzo de 2012, cursante de fs. 8 a 10 de obrados, el accionante


manifiesta lo siguiente.

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Mediante memorial de 11 de enero de 2012, Luís Fernández Fernández, interpone querella


criminal contra de Nelson Corani Álvarez y otro, por la supuesta comisión del delito de lesiones
graves: Consecuentemente, el Fiscal de Materia, Jacinto Aguilar Llave, emitió el requerimiento
fundamentado de aprehensión de 9 de marzo del citado año, acto que todavía no se concretó, pero
existe la amenaza cierta e inminente de que ocurra, fundando aquella decisión en que Nelson
Corani Álvarez, fue identificado como autor, quien no tiene domicilio, familia, actividad laboral
acreditada con documentación idónea y no tiene voluntad de someterse a la investigación,
habiendo por consiguiente peligro de fuga, además, “los imputados” pueden influenciar
negativamente en los testigos y obstaculizar la etapa preliminar, toda vez que el investigador
asignado al caso, según representación señala que el 9 de febrero del mismo año a horas 10:00,
fueron buscados en las oficinas de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de
Oruro (FSUTCO) y no siendo habidos, asimismo el 20 y 27 -se entiende del mismo mes y año-

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1201


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

fueron buscados en sus domicilios, y tampoco los encontraron, presumiéndose su ocultación y esto
deriva en obstaculización.

Asevera el accionante respecto de éste último punto que, nunca fue buscado con instrucción
alguna, ni mucho menos existió cédula judicial o algún tipo de aviso escrito que establezca la
existencia de la investigación. Habiéndose enterado posteriormente del proceso en virtud a un
comentario, a través del memorial de 9 de marzo de 2012, se apersono voluntariamente ante el
representante del Ministerio Público, a objeto de presentar su declaración informativa y se le
mantenga su libertad irrestricta para demostrar su conducta relativa a apoyar la investigación,
solicitud que fue rechazada en la misma fecha ya se habría determinado su aprehensión.

Asegura que los riesgos de fuga y obstaculización son subjetivos, ya que no existe prueba alguna
que su persona no tenga familia, domicilio o trabajo, respondiendo aquello al hecho de que el
Fiscal no admitió su declaración informativa voluntaria, desconociendo lo establecido por el art.
234 del Código de Procedimiento Penal (CPP), en cuanto a la justificación fundamentada, ausente
en la determinación del Fiscal, por lo que considera estar ilegalmente perseguido.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante considera vulnerados sus derechos a la vida, a la libertad y a la locomoción,


mencionando los arts. 22 y 23 de la Constitución Política del Estado (CPE) y transcribiendo parte
de la SC 1520/2011-R de 11 de octubre.

I.1.3. Petitorio

Pide se conceda la tutela reclamada y como consecuencia, se ordene que el representante del
Ministerio Público cese la persecución indebida en virtud a la orden de aprehensión dispuesta el 9
de marzo de 2012, dentro del proceso de “lesiones gravísimas” instaurado por Luis Fernández
Fernández, debiendo dejarse sin efecto alguno tal orden y, por el contrario dicha autoridad señale
día y hora de audiencia para la recepción de su declaración informativa; pide también se condene al
infractor a los “daños y perjuicios pertinentes”.

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de marzo de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 84 a
90 vta., se produjeron los siguientes actuados.

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado de la parte accionante, apersonándose a dicha audiencia mediante representación sin


mandato de su patrocinado, ratificó in extenso la demanda de acción de libertad, sosteniendo que:
a) La presente actividad procesal ha nacido a partir de un proceso penal instaurado por Luis
Fernández Fernández contra Severino Sipe Sánchez y Nelson Corani Álvarez por la presunta
comisión del delito de lesiones graves; y, b) La autoridad fiscal el 9 de marzo de 2012, mediante
requerimiento fundamentado dispone la aprehensión de Severino Sipe Sánchez y Nelson Corani
Álvarez, conforme a los fundamentos insertos en tal Resolución, constituyéndose este acto de
forma directa una persecución indebida, siendo que: 1) Las SSCC 1287/2001 y 0657/2005 que
definen el concepto de persecución ilegal o indebida, con relación al art. 125 de la CPE,
entendiendo aquella como una orden de aprehensión o captura generada por una autoridad que se
encuentre al margen de la Constitución Política del Estado y las leyes, que han sido emitida en
incumplimiento de las formalidades y requisitos que exige la norma, acto que generará una
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1202
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

amenaza efectiva al derecho de locomoción y al derecho de libertad de una persona, incluso


cuando ésta aún no sea consumada; 2) A partir de la aludida Resolución de aprehensión, su
representado puede ser aprehendido, restringiéndose así su derecho de forma inequívoca y
contundente; y, 3) Solo son tres las formas en las cuales la autoridad fiscal puede disponer una
aprehensión, en virtud a lo prescrito por el Código de Procedimiento Penal en sus arts. 224, en caso
de desobediencia a la citación por incomparecencia injustificada y demostrada del citado; 226,
facultad discrecional del fiscal que podrá determinar una orden de aprehensión, restringiendo
directamente la actividad de locomoción de una persona; y, 227 en caso de de flagrancia.

Situándose el accionante en el supuesto del art. 226 del CPP refiere que es exigible la legalidad
formal y material como elementos constitutivos de la aprehensión, debiendo existir una convicción
fundamentada e inequívoca de que el sindicado, en este caso Nelson Corani Álvarez, fuere el autor
del acto antijurídico, que el delito tenga una pena privativa de libertad cuyo mínimo legal sea igual
o superior a dos años y, que existan elementos de convicción suficientes que acrediten que el
imputado podría ocultarse, fugarse, ausentarse del lugar u obstaculizar la averiguación de la
verdad, aspectos que según la SC 0957/2004-R de 17 de junio tienen que ser debidamente
fundamentadas por la autoridad fiscal.

Respecto del requerimiento fundamentado de aprehensión de 9 de marzo de 2012, señaló que se


“vulneró la actividad procesal instruida por ley”, generando un estado de indefensión que constituye un
atentado directo a los derechos de su representado, ya que con la finalidad de disponer su aprehensión y
la del otro coimputado, se considera el informe en conclusiones del investigador asignado al caso,
Blanca Condori Morales, quien en virtud a las entrevistas a los testigos de cargo y cumpliendo las tareas
asignadas por el Fiscal, identifica a Nelson Corani Álvarez y Severino Sipe Sánchez como presuntos
autores del hecho punible, para quienes solicita se libre órdenes de aprehensión, extrañándose una
fundamentación responsable, una relación de hechos básica que establezca como se habría generado la
participación de su representado en el delito investigado, y forme en el Ministerio Público una
convicción y certeza, objetivos respecto de su responsabilidad.

Manifestó también que la Resolución de imputación que analiza primero el informe en conclusiones del
investigador asignado al caso, adolece de las siguientes falencias: i) En algunos casos los procesados son
aludidos como “los sindicados” y en otras “el sindicado”, lo mismo en la Resolución fundamentada de
aprehensión cuando hace referencia a “el sindicado” no pudiendo determinarse si Nelson Corani Álvarez
o Severino Sipe Sánchez es “el sindicado”; ii) Al no haber sido citado su representado, ni comunicado a
los fines de asumir defensa en el proceso penal, no podía haber desvirtuado un peligro de fuga, haciendo
referencia a los arts. 234.1 y 10 del CPP -concernientes al peligro de fuga-; iii) La imputación hace
referencia a que el 12 de febrero de 2012 a horas 10:30, los procesados fueron buscados en oficinas de la
FSUTCO, siendo que no es su domicilio real y tampoco tenían la obligación de estar presentes allí; iv)
Se hace referencia a que el 20 y 27, sin mencionar el mes ni el año correspondiente, fueron buscados en
sus domicilios, sin embargo, en la querella que cursa en el cuaderno de investigaciones, no se hizo
referencia a los domicilios de los presuntos autores, simplemente se limita a señalar “Oruro” como
domicilio; v) El requerimiento fundamentado de aprehensión aludido, no cuenta con una mínima
sustentación legal, atentando directamente al derecho a la libertad de su representado; y, vi) Los arts. “63
del CPP” y 61 de la Ley Orgánica del Ministerio Público (LOMP), establecen que los fiscales al otorgar
sus requerimientos y resoluciones, deben fundamentar las mismas no como un enunciado general,
siendo que la dirección de la investigación cumple una función clave del sistema para asegurar
imparcialidad judicial y determinar que la investigación se realice en el mayor parámetro de eficiencia,
aspectos ausentes en la Resolución de aprehensión mencionada.

Refirió asimismo que, cuando su representado tuvo conocimiento de que a su persona y a Severino
Sipe Sánchez se les seguía un proceso penal, se presentó voluntaria y espontáneamente ante la
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1203
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

autoridad fiscal el 9 de marzo de 2012, a efectos de solicitar se señale día y hora para que se le reciba
su declaración informativa; sin embargo esta petición fue denegada expresamente por dicha
autoridad, disponiendo que se esté al requerimiento fundamentado de aprehensión emitido en la
misma fecha, negándole así la oportunidad de darle a conocer a la autoridad fiscal la información que
requería a cerca de su familia, actividad laboral, domicilio, y que Nelson Corani Álvarez es una
persona dedicada a la dirigencia campesina, además de tener su actividad laboral en CARTONBOL y
LACTEOSBOL.

Continuó aseverando que el coimputado Severino Sipe Sánchez fue aprehendido el día de ayer, en
virtud a la mencionada Resolución fiscal, y el Juez contralor de garantías constitucionales declaró
la ilegalidad de su aprehensión otorgando la libertad irrestricta, al existir un atentado inminente a
los derechos y principios constitucionales. Finalizando, indicó que el principio de subsidiariedad
no concurre cuando la actividad de la autoridad, en este caso del Fiscal, ha dejado al “concurrente”
en un estado total de indefensión que no le permite impugnar los supuestos actos ilegales,
mencionando la SC 0016/2004, tampoco se le ha aceptado su apersonamiento o su toma de
declaración, es decir, si el Fiscal hubiese respondido a la presentación espontánea, tendrían abierta
la vía de la denuncia del Juez cautelar, por lo que se ha cumplido por cualquier lado con el
principio de subsidiariedad, y al persistir la amenaza irreparable, no hay otra vía que no sea la
presente.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

El Fiscal de Materia, Jacinto Aguilar Llave manifestó: Se da a conocer al órgano jurisdiccional del
inicio de la investigación el 26 de enero de 2012, siendo víctima de este hecho Luís Fernández
Fernández y los posibles agresores Severino Sipe Sánchez y Nelson Corani Álvarez, ingresando el
caso mediante el sistema IANUS, con el registro 40119201201300, disponiéndose tareas
investigativas no por su autoridad, sino por el Fiscal que le antecedió, habiéndose designado al
investigador del caso, a efectos de averiguación del hecho denunciado de lesiones graves y leves,
conforme al art. 271 “numeral 1” primera parte del Código Penal (CP). La víctima en la parte
conclusiva indica que tiene treinta días de impedimento, trauma toráxico, fracturas de arcos
costales 7-8 izquierdos, por lo que se procedió conforme el art. 11 del CPP.

Citó el informe de 1 de marzo de 2011, presentado al Ministerio Público por la funcionaria policial
asignada al caso Blanca Condori Morales, quien realizó las entrevistas a los testigos de cargo, y en
cumplimiento de las tareas asignadas por el Fiscal, señaló a Severino Sipe Sánchez y Nelson Corani
Álvarez como presuntos autores del hecho denunciado, para quienes pidió orden de aprehensión. Bajo
estas circunstancias, dispuso la citación del accionante, advirtiéndose que en el reverso de la
representación de 26 de febrero de 2012, que indica, en la ciudad de Oruro, el 8 del mismo mes y año a
horas 10:00, se hizo presente en la FSUTCO, con el fin de “notificar con citación” al imputado Nelson
Corani Álvarez; sin embargo en dicha institución no supieron darle razón del mismo; el 20 y 27 del
citado mes y año, siendo las 11:00, se constituyó en el domicilio del mencionado, ubicado en la calle
Magallanes 87, entre Arce y San Felipe, donde nadie le abrió la puerta, presumiendo la funcionaria
policial que se estaría obstaculizando el proceso de investigación, extremo que sería verificable por las
placas fotográficas tomadas y proporcionadas al Ministerio Público a efectos de un posterior
allanamiento en el mismo domicilio.

Consideró la autoridad demandada que, al manifestar el accionante a través de su abogado la


existencia de un defecto en el proceso, éste debe estar incurso en el Código de Procedimiento Penal
a efecto de pedir una nulidad. En cuanto a que se hubiera “vulnerado” el art. 226 del CPP refirió
que esta norma, claramente establece que el fiscal podrá ordenar la aprehensión del imputado
cuando sea necesaria su presencia y existan suficientes indicios que es autor o partícipe de un
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1204
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

delito de acción pública sancionado con privación de libertad, cuyo mínimo legal de privación de
libertad sea de dos años, y que pueda obstaculizar la averiguación de la verdad; en el presente caso,
refiere que según el art. “229 numeral 1”, el mínimo legal es dos años y el máximo es seis.
Mencionó la SC 0957/2004-R de 17 de junio, explicando que la legalidad de la aprehensión debe
ser formal y material, y cuando el fiscal aprehende a una persona debe considerar la existencia de
suficientes indicios para sostener la autoría del imputado en el momento de la aprehensión; y en el
presente caso, se tienen suficientes indicios y elementos de convicción como ser el certificado
médico forense, los testigos, el registro del lugar del hecho, la declaración de uno de los imputados,
de lo que se infiere que el imputado podría ocultarse, fugarse o ausentarse del lugar, obstaculizar la
averiguación de la verdad, aspectos que se pueden evidenciar claramente en el requerimiento
fundamentado de aprehensión; asimismo explicó que indicar que no se ha puesto una coma, o que
no se ha mencionado al imputado o imputados, que testigos lo vieron, etc., esos serían extremos
formales, que serían detallados en la imputación formal.

Con relación a la presentación espontánea, señaló que, el accionante presentó ante el personal de
valores un memorial el 9 de marzo de 2012 y el 10 del mismo mes y año ante su autoridad,
consignándose un sello, y cuando tuvo que pronunciarse fue cuando le pasaron el memorial un día
después, notificándose con lo resuelto el 15 del citado mes y año a horas 11:10. Asimismo indicó
que la SC “1152/R de 31 de octubre de 2011”, establece que la presentación del imputado es de
carácter personal y no puede alegarse la presentación cuando se envía a otra persona en su
representación aun sea su propio abogado.

Manifestó que, es deber del Ministerio Público dentro de las veinticuatro horas de una aprehensión,
poner al aprehendido a disposición del Juez cautelar, quien determinará si esta es legal o ilegal; en
el caso ya se pronunció un juez controlador de derechos y garantías indicando que era ilegal la
detención del coimputado Severino Sipe Sánchez, “volviendo a decir que también es ilegal por esta
vía para el demandante”, por lo que se estaría abriendo doble competencia. Finaliza puntualizando
que las resoluciones del juez inferior son apelables y en ningún momento se evidenciaron actuados
indebidos o ilegales como se ha indicado.

I.2.3. Resolución

Mediante Resolución 03/2012 de 17 de marzo, cursante de fs. 91 a 95 vta., la Jueza Primera de Sentencia
en lo Penal del departamento de Oruro, constituida en Juez de garantías constitucionales concedió la
tutela solicitada, bajo los siguientes argumentos: 1) Se ha dado inicio a la investigación por el Ministerio
Público en base a una denuncia formulada por Luís Fernández Fernández por el delito de lesiones graves
y leves, tipificado y sancionado por el art. 271 primera parte del CP, quien alega haber sufrido lesiones
con impedimento de treinta días consideradas graves en nuestra normativa penal; 2) Se tiene como un
derecho ser informado del inicio de una causa penal -art. 5 del CPP-, mismo que se efectiviza cuando el
denunciado tiene conocimiento en forma efectiva de la causa penal; 3) El derecho a ser informado de la
acusación o incriminación, no se resume al conocimiento de los hechos considerados punibles que se le
imputan, sino también a la calificación jurídica de los mismos; 4) El emplazamiento personal del
procesado tiene una doble finalidad, la de garantizar su comparecencia en el proceso y la de garantizar el
ejercicio del derecho inalienable a la defensa, es por esta razón que las citaciones y notificaciones no
pueden reducirse a meras formalidades para el cumplimiento de disposiciones procesales, sino
constituirse en un aspecto esencial del procedimiento, por ello la autoridad debe asegurar su efectividad
real; 5) La representación al reverso del formulario de citación para el imputado, no cumple con la
norma que establece la forma de realizar las notificaciones, ni con la finalidad de estos actuados,
ocasionando en la presente causa indefensión y generando una resolución ilegal, porque no reúne las
condiciones mínimas de fundamentación a la que están obligados los fiscales, según los arts. 73 del CPP
y 61 de la LOMP; 6) Mediante providencia al memorial presentado por el accionante, arguyendo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1205
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

presentación espontánea, el Fiscal dispone que se esté a lo requerido, constituyéndose en hechos


emergentes de un primer actuado que no se ha llevado a cabo con las normas establecidas en el
procedimiento penal; 7) El desconocimiento del presente proceso por parte del accionante, constituye
indebido procesamiento, correspondiendo en este caso reponer la vulneración; 8) La garantía a conocer
el inicio de una causa penal, no solamente afecta al debido proceso, sino a la garantía al derecho a la
defensa, por lo que la citación para el imputado, a efectos de que el mismo preste su declaración
informativa ante el Ministerio Público, debió realizarse en forma personal, o en su caso en su domicilio
real, que por cierto no se dio a conocer al Ministerio Público, puesto que en el memorial de 8 de marzo
de 2012, presentado por Luís Fernández Fernández, fundamenta como peligro de fuga que se desconoce
el domicilio de los denunciados; 9) La aludida representación, no cuenta con firma de testigo idóneo que
acredite que se estuvo en el domicilio del accionante, lo que deviene en la nulidad prevista en el art. 166
inc. 3) del CPP; y, 10) la presentación espontánea no sustituye la indefensión ocasionada al accionante, y
siendo que por la vinculación directa con el derecho a la libertad física, no es exigible el agotamiento de
otras vías por ser inminente.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes y pruebas que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. En virtud a la querella criminal de 11 de enero de 2012, de fs. 2 a 3 de repetida de fs. 22 a 23, se
deduce la existencia de una acción penal interpuesta por Luís Fernández Fernández contra Severino Sipe
Sánchez y Nelson Corani Álvarez, por la supuesta comisión del delito de lesiones graves y leves en
grado de autoría, sancionado por el art. 271 primera parte del Código Penal (CP).

II.2. Mediante requerimiento fiscal de 26 de enero de 2012, cursante a fs. 3 vta., repetido a fs. 23 vta., la
Fiscal de Materia, Ava Julieta García, tiene por presentada la mencionada querella, disponiendo que la
misma sea puesta en conocimiento de los querellados Severino Sipe Sánchez y Nelson Corani Alvarez,
de forma personal a efectos de que asuman defensa en el plazo establecido.

II.3. Del comunicado de inicio de investigaciones de 26 de enero de 2012, realizado por Ava
Julieta García, Fiscal asignada al caso y la Resolución de 30 de enero del mismo año del Juez
Primero de Instrucción en lo Penal del Tribunal Departamental de Justicia de Oruro, se tiene que se
activó la competencia de esta autoridad para el correspondiente control jurisdiccional.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, denuncia la vulneración a sus derechos, a la vida, la libertad y a la locomoción, por


considerar que es ilegalmente perseguido por el Fiscal encargado de las investigaciones, dentro de
un proceso penal en el que no se le ha notificado con el inicio de las investigaciones,
correspondiendo a este Tribunal en revisión, analizar si en el presente caso corresponde o no la
tutela impetrada.

III.1. La acción de libertad en el nuevo contexto constitucional

La acción de libertad, antes habeas corpus en la Constitución Política del Estado abrogada,
constituye un medio extraordinario y expedito de defensa del derecho a la vida, a la libertad y a la
locomoción de las personas, considerados éstos como derechos fundamentales de primer orden en
nuestra Norma Fundamental, que por ello ameritan una tutela inmediata y efectiva.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1206


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Está inserta en el art. 125 de la CPE, que a la letra señala: “Toda persona que considere que su vida
esté en peligro, que es ilegalmente perseguida, o que es indebidamente procesada o privada de
libertad personal, podrá interponer Acción de Libertad y acudir, de manera oral o escrita, por sí o
por cualquiera a su nombre y sin ninguna formalidad procesal, ante cualquier juez o tribunal
competente en materia penal, y solicitará que se guarde tutela a su vida, cese la persecución
indebida, se restablezcan las formalidades legales o se restituya su derecho a la libertad”, de donde
se infiere su triple característica funcional, como un medio para prevenir, corregir y reparar las
ilegalidades que afecten a la esfera del derecho a la vida, la libertad y a la locomoción de las
personas.

Norma constitucional congruente con lo establecido por el art. 65 de la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional (LTCP), que refiere: “Es una acción constitucional extraordinaria de tramitación
sumarísima que tiene por objeto la garantía, protección o tutela de los derechos a la vida, a la libertad
física y a la locomoción, para el restablecimiento inmediato y efectivo de estos derechos, en los casos en
que sean restringidos, suprimidos o amenazados de restricción o supresión”.

III.1.1. De la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad

El marco legal descrito en el acápite anterior, configura los parámetros intrínsecos que hacen a la
sustancia de la acción de libertad, mas es menester evocar lo que ha entendido la justicia
constitucional respecto de este instituto jurídico, particularmente la subsidiariedad y su procedencia
desde el 2005, a través del pronunciamiento de la SC 0160/2005-R de 23 de febrero, línea
jurisprudencial consolidada aún ahora, cuando es el Tribunal Constitucional Plurinacional el máximo
órgano encargado de velar por la supremacía de la Constitución Política del Estado, el control de
constitucionalidad y el respeto y vigencia de los derechos y garantías constitucionales. En ese entendido
la mencionada Sentencia refiere:

“De lo anterior se extrae, que la existencia de la garantía constitucional en análisis, no implica que
todas las lesiones al derecho a la libertad tengan que ser necesariamente reparadas de manera
exclusiva y excluyente a través del hábeas corpus; pues no se trata de una garantía que tenga la
vocación de reparar, en exclusiva, todas las formas de lesión a la libertad que pudieran invocarse,
sino la de dotar a la persona de un medio de defensa sencillo, eficaz y oportuno, para restablecer
la lesión sufrida.

En consecuencia, en los supuestos en que la norma procesal ordinaria de manera específica prevea
medios de defensa eficaces y oportunos para resguardar el derecho a la libertad supuestamente
lesionado, estos deben ser utilizados, previamente, circunstancia en la que excepcionalmente, el recurso
de habeas corpus operará de manera subsidiaria.

El entendimiento interpretativo aludido guarda compatibilidad con los instrumentos internacionales de


protección de los derechos humanos. En efecto, lo que exigen tales instrumentos, es que los países
partes, provean en sus ordenamientos, un medio de defensa efectivo; esto es pronto y eficaz, contra
actos que lesionen los derechos fundamentales, entre ellos, el derecho a la libertad. Conforme a esto, el
art. 8 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, proclama que 'Toda persona tiene derecho a
un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen
sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley'.

En lo regional, el art. 7.6 de la Convención Americana de Derechos Humanos o Pacto de San José de
Costa Rica, con más especificidad, proclama que 'Toda persona privada de libertad tiene derecho a
recurrir ante un juez o tribunal competente, a fin de que éste decida, sin demora, sobre la legalidad de
su arresto o detención y ordene su libertad si el arresto o la detención fueran ilegales. En los Estados
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1207
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

partes cuyas leyes prevén que toda persona que se viera amenazada de ser privada de su libertad tiene
derecho a recurrir a un juez o tribunal competente a fin de que éste decida sobre la legalidad de tal
amenaza, dicho recurso no puede ser restringido ni abolido. Los recursos podrán interponerse por sí o
por otra persona'.
Como se puede apreciar, lo que persiguen los pactos internacionales sobre derechos humanos, es
garantizar la existencia de un recurso sumario, pronto y eficaz, al que pueda acudir toda persona, para
que ésta sin demora, decida sobre la lesión a la libertad alegada, recurso que no necesariamente tiene
que ser, el hábeas corpus.

Consiguientemente, como el ordenamiento jurídico no puede crear y activar recursos simultáneos


o alternativos con el mismo fin sin provocar disfunciones procesales no queridas por el orden
constitucional, se debe concluir que el proceso constitucional del hábeas corpus, únicamente se
activa cuando los medios de defensa existentes en el ordenamiento común, no sean los idóneos
para reparar, de manera urgente, pronta y eficaz, el derecho a libertad ilegalmente restringido.
No es posible acudir a este recurso, cuando el ordenamiento jurídico prevé medios de
impugnación específicos y aptos para restituir el derecho a la libertad, en forma inmediata.
Conforme a esto, solamente una vez agotado tal medio de defensa y ante la persistencia de la
lesión, se podrá acudir a la jurisdicción constitucional, invocando la tutela que brinda el hábeas
corpus” (el resaltado es nuestro).

Ahora bien, consecuente con éste carácter excepcional de la subsidiariedad de la acción de libertad
desarrollado, el Tribunal Constitucional también se ha pronunciado, a través de la SC 0080/2010-R
de 3 de mayo, explicando las situaciones en las que no se puede dilucidar el fondo de las acciones
de libertad:

“Primer supuesto:

Si antes de existir imputación formal, tanto la Policía como la Fiscalía cometieron arbitrariedades
relacionadas al derecho a la libertad física o de locomoción, y todavía no existe aviso del inicio de la
investigación, corresponde ser denunciadas ante el juez cautelar de turno. En los casos en los que ya se
cumplió con dicha formalidad procesal, es decir, con el aviso del inicio de la investigación, al estar
identificada la autoridad jurisdiccional, es ante ella donde se debe acudir en procura de la reparación
y/o protección a sus derechos. De no ser así, se estaría desconociendo el rol, las atribuciones y la
finalidad que el soberano a través del legislador le ha dado al juez ordinario que se desempeña como
juez constitucional en el control de la investigación.

Segundo Supuesto:

Cuando existe imputación y/o acusación formal, y se impugna una resolución judicial de medida
cautelar que; por ende, afecta al derecho a la libertad física o de locomoción, con carácter previo a
interponer la acción de libertad, se debe apelar la misma, para que el superior en grado tenga la
posibilidad de corregir la arbitrariedad denunciada. Puesto que el orden legal penal ha previsto ese
medio impugnativo, precisamente para que a través de un recurso rápido, idóneo, efectivo y con la
mayor celeridad se repare en el mismo órgano judicial, las arbitrariedades y/o errores que se hubiesen
cometido en dicha fase o etapa procesal. Lo propio si está referido a cuestiones lesivas a derechos
fundamentales relacionados a actividad procesal defectuosa, o relacionado al debido proceso, casos en
los cuales se debe acudir ante la autoridad judicial que conoce la causa en ese momento procesal,
puesto que el debido proceso es impugnable a través de la acción de libertad, sólo en los casos de
indefensión absoluta y manifiesta, o que dicho acto sea la causa directa de la privación, o restricción a
la libertad física.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1208


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Tercer supuesto:

Si impugnada la resolución la misma es confirmada en apelación; empero, en lugar de activar


inmediatamente la acción libertad, decide voluntariamente, realizar una nueva petición ante la
autoridad ordinaria, tendiente a un nuevo análisis y reconsideración de su situación jurídica, sea
mediante una solicitud de modificación, sustitución, cesación de detención preventiva, etc., y la misma
está en trámite, en esos casos, ya no es posible acudir a la jurisdicción constitucional impugnando la
primera o anterior resolución judicial, donde se emitió el auto de vista, inclusive; por cuanto las partes
de un proceso están impelidas de actuar con lealtad procesal, de no ser así, se provocaría una
duplicidad de resoluciones en ambas jurisdicciones, e incidiría negativamente en el proceso penal de
donde emerge la acción tutelar” (el resaltado es agregado).

III.1.2. El juez ordinario en su rol de juez constitucional

Nuestro ordenamiento jurídico en materia penal, instituye la figura del juez de instrucción como
aquella autoridad que está destinada a ejercer en prima facie un control sobre la investigación,
desde los actos iniciales hasta la conclusión de la etapa preparatoria, así el art. 54 inc. 1) del CPP,
modificado por la Ley 007 de 18 de mayo de 2010, establece que los jueces de instrucción serán
competentes para: “El control de la investigación, conforme a las facultades y deberes previstos
en este Código”, lo cual nos remite a lo prescrito por el art. 5 del mismo adjetivo penal que indica:
“…El imputado podrá ejercer todos los derechos y garantías que la Constitución, las Convenciones
y los Tratados internacionales vigentes y este Código le reconozcan, desde el primer acto del
proceso hasta su finalización” (el resaltado es añadido).

Entendiéndose de un análisis integral de la normativa explicada, la existencia de un órgano jurisdiccional


competente por disposición de la ley, que puede conocer y resolver de manera directa y expedita
cualquier reclamo de vulneración a algún derecho o garantía constitucional.

III.2. Análisis del caso concreto

De la atenta revisión de los antecedentes y de un análisis de la prueba que cursa en el expediente,


se establece que dentro del proceso penal seguido a instancia del Ministerio Público, a denuncia de
Luís Fernández Fernández, contra Nelson Corani Álvarez y otro, por la supuesta comisión del
delito de lesiones graves y leves, tipificado por el art. 271 primera parte del CPP, se tiene que el
demandante acusa persecución indebida y por lo mismo vulneración a sus derechos, a la vida, a la
libertad y a la locomoción, en virtud al requerimiento fundamentado de aprehensión -fs. 56 y vta.-
y al mandamiento de aprehensión -fs. 58- librados el 9 de marzo de 2012 por Jacinto Aguilar
Llave, Fiscal de Materia, de la ciudad de Oruro, asegurando que no se le ha notificado debidamente
con el inicio de las investigaciones, por lo mismo alega no haber tenido conocimiento de las
mismas; sin embargo, el demandante no acude con este reclamo ante la autoridad competente,
establecida según los arts. 5 y 54 inc. 1) del CPP, que para el caso es el Juez Primero de Instrucción
en lo Penal del departamento Oruro.

Con relación a lo anotado, en un caso similar el Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de la SCP
0011/2012 de 16 de marzo, se ha pronunciado en el siguiente sentido: “De la revisión de los
antecedentes que cursan en obrados, se establece que es de aplicación a la problemática en revisión el
primero de los supuestos antes señalados; por cuanto, si bien a tiempo de plantearse esta acción aún no
existía imputación formal en contra del accionante, empero, la Fiscal asignada al caso dio aviso
oportuno sobre el inicio de la investigación al Juez cautelar, en estricta observancia de lo establecido
en la última parte del art. 289 del CPP; existiendo por lo tanto y desde ese momento, autoridad
judicial responsable del control de la investigación ante quien -en todo caso- correspondía denunciar
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1209
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

cualquier acto ilegal u omisión indebida en la que pudieron incurrir el Fiscal o miembros de la
Policía Nacional, quienes de conformidad con el art. 279 del CPP, actúan siempre bajo control
jurisdiccional; en ese entendido, dicha autoridad judicial estaba facultada para adoptar las
determinaciones que correspondieren en resguardo de los derechos del imputado durante la fase de
la investigación, por lo que al existir un medio de defensa específico, idóneo, eficiente y oportuno
para el restablecimiento del derecho a la libertad que el accionante estima lesionado, corresponde
aplicar la subsidiariedad excepcional de la acción de libertad, lo que impide cualquier análisis de
fondo respecto a los hechos que la motivaron, cuya compulsa corresponderá al Juez cautelar, quien
deberá adoptar las medidas inmediatas y urgentes para revertir las arbitrariedades denunciadas por el
accionante, derivadas fundamentalmente de su falta de citación para prestar declaración informativa
y su desconocimiento de la denuncia y de los denunciantes; debiendo compulsar si se observó
estrictamente esta formalidad de carácter inexcusable y, en su defecto, al margen de rectificar el
procedimiento, aplicar las sanciones que correspondan, determinando inclusive responsabilidad
penal si se hubiere actuado maliciosamente al prescindir de la legal citación al imputado; por cuanto,
si bien por los fundamentos precedentemente anotados, en el caso presente resulta imposible ingresar
al análisis de fondo del asunto planteado, no es menos evidente que este nuevo Tribunal Constitucional
Plurinacional, para el fiel cumplimiento de los fines que le asigna la Constitución Política del Estado, se
ha propuesto mayor acción en el respeto y vigencia de los derechos y garantías constitucionales,
evitando toda arbitrariedad, como las derivadas de la falta de citación o notificación al imputado” (el
resaltado es añadido).

En consecuencia el Juez de garantías, al haber concedido la tutela solicitada, no ha valorado en


forma correcta los antecedentes del proceso ni las normas aplicables al mismo.

POR TANTO

EL Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera, en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve: REVOCAR la Resolución 03/2012 de 17 de
marzo, cursante de fs. 91 a 95 vta., pronunciada por la Jueza Primera de Sentencia del Tribunal
Departamental de Justicia Oruro y en consecuencia DENEGAR la tutela solicitada por los
fundamentos expuestos.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez-Magistrada


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños-Magistrada
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0155/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA TERCERA
Mag. Relatora: Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Acción de libertad
Expediente: 00318-2012-01-AL
Departamento: La Paz

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1210


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

En revisión la Resolución 14/2012 de 29 de febrero, cursante de fs. 44 a 45 vta. pronunciada dentro


de la acción de libertad interpuesta por Víctor Vargas Bravo en representación sin mandato de
Pedro Alejandro Mackfarlane Minaya contra Ramiro López Guzmán y Ángel Arias Morales,
Presidente y Vocal de la Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

El accionante, mediante memorial presentado el 15 de febrero de 2012, cursante de fs. 1 a 3 vta.,


refiere que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 30 de septiembre de 2011, el Juez Sexto de Sentencia del departamento de La Paz emitió la


Resolución “142/2011”, declarando procedente la solicitud de cesación a la detención preventiva en
la que dispuso la aplicación de medidas sustitutivas de su representado, Pedro Alejandro Mackfarlane
Minaya quien interpuso recurso de apelación y fue notificado en la oficina de su abogado el 14 de
febrero de 2012 a horas 9:03, con el señalamiento de audiencia de consideración de medida cautelar a
realizarse el 15 de febrero a horas 9:40.

Refiere que su abogado tenía otra audiencia el mismo día y hora de la programada en el presente
caso; acreditando tal situación pidió la suspensión de la misma; a pesar de ello y ante la ausencia de
su abogado, las autoridades ahora demandadas, la llevaron a cabo y mediante Resolución revocaron
sus medidas sustitutivas, disponiendo su detención preventiva, al no existir otro recurso, sostiene que
la vía ordinaria habría concluido, habilitándose la constitucional a través de la presente acción, en la
que indica como vulnerados su derecho a la defensa técnica, a la libertad y a ser oído.

Argumenta, que los arts. 115, 116.I y 119 de la Constitución Política del Estado (CPE), establecen
que toda persona será protegida oportuna y efectivamente por los jueces y tribunales en ejercicio de
sus derechos e intereses legítimos; es decir, el Estado debe garantizar el debido proceso, asimismo, las
partes en conflicto gozan de igualdad de oportunidades para ejercer durante el proceso, las facultades
y los derechos que les asisten, como ser el derecho a la defensa; sostiene que en las actas de audiencia
de consideración de apelación restringida, el accionante no contó con la respectiva defensa técnica, a
pesar de ello las autoridades demandadas, vulnerando la última parte del art. 104 del Código de
Procedimiento Penal (CPP), no designaron un defensor de oficio.

Por memorial de subsanación de 16 de febrero de 2012, manifestó que por un error involuntario, se
interpuso la presente acción de libertad contra Fernando Ganan; aclarando que la legitimación pasiva
es interpuesta contra Ramiro López Guzmán, Presidente y Miguel Ángel Arias Morales Vocal ambos
de la Sala Penal Tercera.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante estima vulnerados sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la defensa, citando al
efecto los arts. 115 y 125 de la (CPE).

I.1.3. Petitorio

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1211


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Solicita se le conceda la tutela y se restablezcan las formalidades de ley revocando la Resolución


55/2012 de 15 de febrero, emitida por la Sala Penal Tercera del Tribunal Departamental de Justicia de
La Paz.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 17 de febrero de 2012, según consta en el acta cursante de fs. 25 a
29, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ampliación de la acción

El abogado del accionante, ampliando la acción de libertad expuso lo siguiente: a) La acción


penal fue promovida ante el Ministerio Público contra Pedro Alejandro Mackfarlane Minaya,
por el delito de estafa, y a pedido de las “pseudo víctimas”, el Juez Sexto de Sentencia, dispuso
la conversión de la acción; por lo que, inmediatamente pidieron la cesación a su detención
preventiva; b) A la fecha no existe acusación formal presentada por el Juzgado Sexto de
Sentencia; por lo que, en el mes de octubre le otorgaron medidas sustitutivas al accionante; c) El
Juez de la causa, pidió informe al juzgado de origen para que certifiquen si habría cumplido las
medidas sustitutivas que se le impuso; d) Ante la apelación incidental del “pseudo querellante”,
la Sala Penal Tercera fijó día y hora de audiencia, siendo notificado el accionante en la oficina
de su abogado, quien presentando justificativo solicitó la suspensión de la audiencia de
apelación incidental de medida cautelar donde señala: Primero, la audiencia es instalada a horas
10:30 de la mañana, y no a las 9:40; segundo, instalaron la misma sin la presencia de su
abogado. Si bien existe jurisprudencia donde establece que la apelación incidental se pueda
efectuar sin la presencia del imputado, no es menos cierto que el art. 9 del CPP, dispone que
“todo imputado tiene derecho a la asistencia y defensa de un abogado desde el primer acto del
proceso hasta el fin de la ejecución de sentencia, pues este derecho es irrenunciable, asimismo
refiere que los arts. 115, 116, 119 y 120 del CPP, indican que en caso de inasistencia de defensa
técnica el Tribunal en resguardo del debido proceso y garantías constitucionales, debe nombrar
un defensor de oficio; en ese sentido, la Sala Penal Tercera llevó adelante la audiencia sin la
presencia de su abogado, revocando las medidas sustitutivas otorgadas por el Juez Sexto de
Sentencia e impuso la detención preventiva; y, e) Finalmente, expresa que la Sala antes
mencionada al haber llevado la audiencia sin defensa técnica -derecho que es irrenunciable-
solicita la reparación de daños, declarando probada la acción de libertad debiendo anularse la
Resolución 55/2012, emitida por la Sala Penal Tercera y en consecuencia se restituya la libertad
del ahora accionante.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

La autoridades demandadas, Ramiro López Guzmán y Ángel Arias Morales, Presidente y Vocal de
la Sala Penal Tercera, por informe cursante de fs. 19 a 20, manifestaron lo siguiente: 1) El “proceso
caratulado Suarez/Mackfarlane” fue elevado en apelación incidental sobre cesación a la detención
preventiva, recurso que fue radicado en la Sala Penal Tercera; 2) De la tablilla de audiencias que
adjunta, establece que la audiencia del accionante, era posterior a otras; es decir, no se instaló a la
hora fijada, siendo que el accionante pidió la suspensión con el argumento de que supuestamente
su abogado tendría otra audiencia en el Juzgado Tercero de Instrucción en lo Penal, el 15 de
febrero de 2012, a horas 10:00, que se encuentra ubicado en el anexo de la Sala Penal Tercera, el
personal de apoyo pudo evidenciar que esta se había suspendido y pese a ello su abogado no se
apersonó ante esta; por lo que, a efectos de asumir defensa material, en audiencia se le otorgó la
palabra al imputado, quien se abstuvo; posteriormente se emitió la Resolución correspondiente
disponiéndose la detención preventiva del accionante; 3) Por el informe evacuado por la Secretaría
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1212
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del Juzgado Tercero de Instrucción, el cual menciona que la audiencia se había suspendido y que el
abogado Víctor Vargas Bravo no asistió a la misma; 4) Refieren que la Sala que presiden, optó por
llevar adelante este actuado en cumplimiento de la SC 1509/2011, que orienta la aplicación de
medidas cautelares de carácter personal, inclusive en ausencia del imputado, consiguientemente
señala que al haber estado el imputado en audiencia, se prosiguió hasta emitir Resolución; y, 5)
Finalmente, refiere que no han vulnerado su derecho a la defensa, por tanto solicitan denegar la
tutela impetrada.

I.2.3. Resolución

La Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, por Resolución 14/2012 de
29 de febrero, concedió la tutela solicitada, disponiendo que la Sala Penal Tercera, dentro del plazo de
setenta y dos horas emita una nuevo fallo, que resuelva la apelación respecto a las medidas cautelares
y la situación jurídica del accionante, en base a los siguientes fundamentos: i) Se cumplieron las
medidas sustitutivas otorgadas por el juez a quo a cabalidad y los vocales de la Sala Penal Tercera
habrían incurrido en vicio procesal, al haber instalado el acto sin presencia del abogado defensor del
imputado, haciendo mención de la existencia de jurisprudencia, señalando que en grado de apelación
se pueden llevar las audiencias sin presencia del imputado y con la sola presencia del abogado
defensor, pero al contrario llevar la audiencia con el imputado y sin defensa técnica, violando el art. 9
del CPP, se habría vulnerado también el art. 116 de la CPE, pues no se observaron los arts. 119 y 120
de la CPE; que refieren que las partes deben gozar de igualdad de oportunidades en todo proceso y
toda persona tiene derecho a ser oída; y, ii) Citándose el art. 125 de la CPE, indica que se debe
considerar la SC 1188/2006-R, que establece que “el derecho a la defensa técnica es irrenunciable, lo
que significa que toda determinación debe realizarse en audiencia, en presencia de las partes
procesales y de sus abogados, a fin de que estos puedan asumir defensa en igualdad de condiciones,
ya que la autoridad jurisdiccional ante la incomparecencia del abogado defensor, citado y notificado
legalmente, tiene la obligación de designarle defensor de oficio”.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se indican


seguidamente:

II.1. El memorial de interposición de la acción de libertad presentado el 16 de febrero de 2012,


firmado por el representante del accionante, Víctor Vargas Bravo (fs. 1 a 3 vta.).

II.2. A través de la tablilla de audiencias de la Sala Penal Tercera, se puede verificar que el 15 de
febrero de 2012, se programaron dos audiencias, anteriores a la audiencia de medidas cautelares del
imputado Pedro Alejandro Mackfarlane Minaya; es decir, la primera de ese día era a horas 9:00, la
segunda a horas 9:30 y la tercera que se relaciona al caso, a horas 9:40 (fs.18 y vta.).

II.3. A petición verbal de Ángel Arias Morales, Vocal de la Sala Penal Tercera, la Secretaria
Abogada del Juzgado Tercero de Instrucción en lo Penal, Malena Lenny Cazana Apaza, certificó que:
“dentro de las investigaciones preliminares seguidas por el Ministerio Público a querella de Grethel
Mariaca contra Jorge Frías Bilbao Rioja, se ha señalado audiencia conclusiva para el 15 de febrero de
2012 a horas 10:00, en la se hizo presente únicamente la abogada apoderada de la parte querellante
Dra. Grethel Mariaca”; por lo que, en el acta de dicha audiencia consta la presencia de la misma y la
ausencia del Fiscal, del imputado y sus abogados, estando entre ellos Víctor Vargas Bravo. (fs. 22 y
23).

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1213


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II.4. El Secretario Abogado del Juzgado Sexto de Sentencia, Félix Pacoricona López, el 21 de abril
de 2011, emitió certificación manifestando que dentro del proceso penal instaurado por Eliana Suárez
Vega contra Pedro Alejandro Mackfarlane Minaya, se tiene: “Primero: la fecha de radicatoria del
presente proceso penal, según fs. 401 de obrados es el 24 de septiembre de 2011; segundo: a fs. 383
cursa la resolución de conversión de acción (BYL-491 'A'/2011), solicitada por la parte querellante en
fecha 15 de agosto de 2011; y, tercero: a la presente fecha de la revisión de obrados se evidencia de
que no cursa memorial de acusación particular de parte de la querellante Eliana Suárez Vega” (fs. 24).
II.5. Mediante memorial de 17 de febrero de 2012, Víctor Eddy Vargas Bravo, como representante
del accionante, al existir un voto disidente de los vocales, solicitó a la Sala Penal Segunda, la
permanencia en celdas judiciales de Pedro Alejandro Mackfarlane Minaya y no se remita al penal de
San Pedro, hasta que la Sala Penal Tercera, se pronuncie con una nueva resolución dentro de la acción
de libertad planteada (fs. 30).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El representante del accionante alega la vulneración de los derechos a la libertad, al debido proceso y
a la defensa de su representado, puesto que ante la disposición de medidas sustitutivas, el accionante
presentó apelación, que fue conocida por los Vocales de la Sala Penal Tercera -ahora demandados-,
quienes instalaron la audiencia fuera de la hora prevista y sin considerar que el accionante no contaba
con la defensa técnica correspondiente, revocando las medidas sustitutivas otorgadas, y disponiendo
la detención preventiva del accionante, quien hasta la fecha de interposición de la presente acción
continúa privado de libertad.

En consecuencia, corresponde determinar en revisión, si se debe conceder o no la tutela solicitada.

III.1. El derecho a la defensa técnica durante el desarrollo de todo el proceso penal

Antes de ingresar al análisis de la problemática planteada en el presente caso, es preciso referir que
dentro del sistema jurídico diseñado por la Constitución Política del Estado, se ha establecido el
reconocimiento del bloque de constitucionalidad integrado por los tratados y otros instrumentos
internacionales de derechos humanos (arts. 256 y 410.II de la CPE), entre ellos se encuentra la
Convención Americana sobre Derechos Humanos.

El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos ratificado por Bolivia mediante Decreto
Supremo (DS) 18950 de 17 de mayo de 1982, (elevado a

rango de Ley 2119 promulgada el 11 de septiembre de 2000), establece el derecho fundamental de


toda persona sometida a proceso, sujeto a una serie de garantías mínimas, entre las que se encuentra
reconocida la defensa material, expresada como el derecho: “A hallarse presente en el proceso y a
defenderse personalmente o ser asistida por un defensor de su elección, a ser informada, si no
tuviera defensor, del derecho que le asiste a tenerlo; y, siempre que el interés de la justicia lo exija, a
que se le nombre defensor de oficio, gratuitamente, si careciere de medios suficientes para pagarlo”
(las negrillas nos corresponden).

Por otra parte, la Constitución Política del Estado en su art. 119.II, dispone que toda persona tiene
derecho inviolable a la defensa; es decir, que el Estado proporcionará a las personas denunciadas o
imputadas una defensora o un defensor gratuito, en casos que no cuenten con los recursos económicos
necesarios y según los arts. 8 y 9 del CPP y la jurisprudencia sentada por el Tribunal Constitucional a
través de la SC 1556/2002-R de 16 de diciembre, el derecho a la defensa: “…tiene dos dimensiones:
a) La defensa material: que reconoce a favor del imputado el derecho a defenderse por sí mismo y le
faculta a intervenir en toda la actividad procesal -desde el primer acto del procedimiento-, de modo
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1214
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

que siempre pueda realizar todos los actos que le posibiliten excluir o atenuar la reacción penal
estatal; principio que está garantizado por la existencia del debate público y contradictorio; y, b) La
defensa técnica, consiste en el derecho irrenunciable del imputado de contar con asistencia de un
abogado desde el inicio del procedimiento hasta el final de la ejecución de la condena…” (las
negrillas son nuestras). Asimismo y con el fin de hacer efectiva la garantía de contar con un defensor,
mediante Ley 2496 de 4 de agosto de 2003, se ha creado el Servicio Nacional de Defensa Pública,
con la finalidad de garantizar la inviolabilidad de la defensa del imputado.

Al respecto y según la opinión de Jorge Eduardo Vásquez Rossi, se puede decir que si bien es
importante la defensa material del imputado, la defensa técnica sigue constituyendo, la más efectiva
garantía para el resguardo de sus derechos, sea que se ejerza por el abogado de su confianza,
abogados de Defensa Pública o el defensor de oficio, sostiene que en el art. 9 del actual Código
Adjetivo, le otorga prevalencia a la defensa técnica al declarar su carácter irrenunciable, ya que con
similares características se encuentra contenida y regulada en los arts. 92 y 94 del CPP; asimismo
afirma que, su inobservancia, conforme a lo establecido por el art. 100 del mismo Código, no sirve
para fundar ninguna decisión contra el imputado.

En ese entendido, se puede establecer que la defensa técnica y la defensa material, se encuentran
estrechamente relacionadas, puesto que para asumir el derecho a la defensa, el imputado tiene la
posibilidad de que ambas puedan concurrir al mismo tiempo durante el desarrollo de todo el proceso
penal, pues nadie puede ser condenado, sin ser previamente oído y juzgado en proceso legal; sin
embargo, la defensa técnica es un derecho que no está constituido como una facultad o potestad, sino
más bien, es un derecho irrenunciable que trata de precautelar y resguardar el derecho a la defensa del
imputado, razón por la cual, mínimamente debe contar con la asistencia de una persona con
conocimiento jurídico, ya sea el abogado de su confianza o el defensor de oficio designado por la
autoridad competente, pues el incumplimiento de la parte in fine del art. 94 del CPP, no permite
utilizar bajo ninguna circunstancia la información obtenida contra el imputado, situación que
conforme el art. 169 inc. 3) del CPP, constituye actividad procesal defectuosa.

III.2. La necesidad del juez o tribunal de garantías, de convocar a un vocal dirimidor acorde al
principio de celeridad que caracteriza a la acción de libertad

Es preciso recordar que por previsión expresa del art. 126.III de la CPE, refiere que: “…la autoridad
judicial obligatoriamente y bajo responsabilidad, dictará sentencia en la misma audiencia…”,
concordante con el art. 68.1 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional, establece el
procedimiento de la tramitación que se debe aplicar en la acción de libertad: “Presentada la acción, la
jueza, juez o tribunal señalará de inmediato día y hora de audiencia pública, la que tendrá lugar dentro
de las veinticuatro horas contadas de interpuesta la Acción” (las negrillas nos corresponden).

De la interpretación de las normas citadas, se puede colegir que cuando se trata de una acción de
libertad, en ningún caso podrá suspenderse la audiencia, una vez admitida y fijada la misma, no existe
justificativo para que sea suspendida, en atención de los derechos que se encuentran protegidos; no es
posible suspender este actuado procesal para convocar a un vocal dirimidor, corresponde la
convocatoria de manera inmediata; es decir, con objeto de cumplir con la naturaleza y el principio de
celeridad que caracteriza a esta acción, como refiere la norma, la audiencia deberá fijarse dentro de las
veinticuatro horas contadas de interpuesta la acción, y en la misma de forma inmediata dictar la
resolución respectiva, de lo contrario el Juez o Tribunal de garantías, incurriría en dilaciones
injustificadas y no permitidas por nuestro ordenamiento jurídico.

De no cumplirse con lo enunciado, el legislador ha previsto a través del art. 68.3 de la LTCP, que: “La
dilación será entendida como falta gravísima de la jueza, juez o tribunal que conoce la acción, sin
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1215
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

perjuicio de responsabilidad penal que pudiera surgir por el daño causado”; por lo que, en caso de
presentarse la necesidad de convocar a un vocal dirimidor, el Juez o Tribunal de garantías, debe obrar
conforme a derecho, tomando en cuenta las características que asisten a la acción de libertad, como
ser: el informalismo, la sumariedad, la generalidad y la inmediación.

III.3. En cuanto al plazo de remisión de la acción de libertad ante el Tribunal Constitucional


Plurinacional

Resulta necesario indicar que el art. 2 de la LTCP, establece que el Tribunal Constitucional
Plurinacional, ejerce la justicia constitucional, teniendo la finalidad de velar por la supremacía de la
Constitución Política del Estado; el control de constitucionalidad, precautela el respeto y vigencia de
los derechos y garantías constitucionales. Los juzgados o tribunales de garantías al conocer las
acciones de defensa, deben pronunciarse conforme a la Constitución Política del Estado y la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional.

Respecto al procedimiento constitucional, las resoluciones pronunciadas por jueces y tribunales de


garantías, deberán ser remitidas en revisión ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, así lo
establece el art. 126.IV de la CPE, concordante con el art. 69.1 de la LTCP; la resolución pronunciada
debe ser fundamentada en la misma audiencia, misma que debe ser elevada en revisión de oficio,
ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, en el plazo de veinticuatro horas, siguientes a su
emisión.

Bajo la interpretación gramatical de esas normas, se puede colegir que todos los jueces y tribunales de
garantías, tienen la obligación de remitir las acciones de libertad, ante el Tribunal Constitucional
Plurinacional, en el plazo de veinticuatro horas siguientes de pronunciada la resolución, caso contrario
dichas autoridades estarían actuando sin observar las características esenciales que atingen a esta
acción.

III.4. Análisis del caso concreto

En el presente caso el representante del accionante, alega que la audiencia de medidas cautelares de su
representado -Pedro Alejandro Mackfarlane Minaya-, se llevó a cabo después de la hora prevista y sin
la presencia de su abogado y a pesar de ello los vocales de la Sala Penal Tercera -ahora demandados-
revocaron las medidas sustitutivas otorgadas, disponiendo la detención preventiva del accionante.

III.4.1. De la revisión del informe y antecedentes, corresponde precisar que la audiencia de apelación
de medidas cautelares fue programada por la Sala Penal Tercera para el 15 de febrero de 2012, sin
embargo su realización resultó posterior a otras dos audiencias; por lo que, al haber existido demora
en las primeras, automáticamente se retrasarían las siguientes, en ese sentido si el accionante sostiene
que la audiencia referida no se llevó a cabo en el horario establecido y las autoridades demandadas
confirman el retraso, fue por razones justificables que no se consideran de mayor relevancia.

Por otra parte, se puede evidenciar que uno de los abogados, dentro de la investigación preliminar
seguida por el Ministerio Público contra Jorge Frías Bilbao Rioja, era Víctor Vargas Bravo y de
acuerdo a la certificación emitida por la Secretaria Abogada del Juzgado Tercero de Instrucción en lo
Penal de La Paz, en la audiencia conclusiva fijada para el 15 de febrero de 2012 a horas 10:00,
solamente se hizo presente la abogada de la parte querellante y no el abogado del imputado - Víctor
Vargas Bravo-; es decir, que a pesar de la inasistencia del abogado a la otra audiencia, éste no se hizo
presente a la audiencia programada dentro del proceso que se lleva a cabo contra el accionante, siendo
que se instaló dicha audiencia más tarde de la hora prevista y que el justificativo para solicitar la
suspensión de esta fue la programación simultanea de estas dos audiencias. En ese sentido, el abogado
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1216
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

del accionante, si no tuvo la certeza de la suspensión de la audiencia, no podía suponer que no se


efectuaría el acto procesal referido; por lo que, al asumir el compromiso de asesorar al accionante,
tenía el deber ético moral de asistirlo, como en este caso, si no se hizo presente a la audiencia
programada en el mismo
horario.
III.4.2. Ahora bien, con relación al acto lesivo denunciado, es necesario precisar que con el
señalamiento de audiencia de consideración de apelación incidental de medidas cautelares interpuesta
por la querellante, para el 15 de febrero de 2012 a horas 9:40, se notificó al accionante en la oficina de
su abogado, a cuyo efecto las autoridades demandadas, la instalaron sin tomar en cuenta que el
abogado del accionante no estaba presente, vulnerando su derecho a la defensa técnica, pues
conforme al Fundamento Jurídico III.1 desarrollado en esta Sentencia Constitucional, las autoridades
demandadas no deben permitir durante el proceso, que el imputado asista a la audiencia sin la
necesaria asistencia técnica, de lo contrario, deberían haber nombrado un defensor de oficio;
vulnerándose su derecho a la defensa.

En cuanto a la detención preventiva dispuesta por las autoridades demandadas, es una consecuencia
de la audiencia referida en el párrafo anterior, en la que se han vulnerado los derechos del accionante;
por que fue llevada a cabo en ausencia de su abogado, existiendo vicio procesal, menos aún podían
ingresar a analizar y disponer su detención preventiva, considerando de manera errónea la aplicación
de la jurisprudencia del entonces Tribunal Constitucional, desarrollada en la SC 1509/2011-R, en la
que sustenta su Resolución, la Sala Penal Tercera -ahora demandada- refiere que, en la audiencia de
medidas cautelares en grado de apelación: i) N es obligatoria la notificación personal; y, ii) El derecho
que tienen las partes a una resolución judicial motivada; se puede observar que la Sentencia
Constitucional referida en ninguna de sus partes indica que se puede aplicar medidas cautelares de
carácter personal, inclusive en ausencia del imputado; aspectos que no armonizan y ni coinciden con
la aplicación de dicho fallo en la argumentación del Tribunal de garantías, en virtud a ello,
efectivamente se han vulnerado los derechos que hace mención el accionante; por lo que, ingresando
al análisis de fondo de la problemática planteada, corresponde conceder la tutela solicitada.

III.4.3. Con relación a la indebida dilación para convocar a un Vocal dirimidor, de acuerdo a la parte
in fine del acta de audiencia de acción de libertad, celebrada el 17 de febrero de 2012 (fs. 29), Ricardo
Chumacero Tórrez y Félix Peralta Peralta, Vocales de la Sala Penal Primera y Segunda del Tribunal
Departamental de Justicia de La Paz, señalaron que al no existir consenso para la Resolución “no se
dispone la libertad del detenido preventivamente y se dispone que la Sala Penal Tercera debe emitir
dentro del plazo de setenta y dos horas una nueva resolución que resuelva la situación jurídica de la
apelación respecto a las medidas cautelares y existiendo disidencia se dispone se convoque un Vocal
de Salas Penales que se encuentre habilitado”; posteriormente, el abogado del accionante por la vía de
complementación en lo concerniente a la convocatoria de un Vocal, preguntó: “dentro de qué plazo se
convocará y dentro de qué tiempo se tiene que pronunciar”; en virtud a ello el Vocal Félix Peralta
Peralta respondió que se debe convocar de manera inmediata, considerando los alcances y términos
sumarísimos que establece la Constitución Política del Estado; sin embargo, se puede evidenciar que
mediante providencia de 23 de febrero de 2012, los Vocales de la Salas Penales fueron declarados en
comisión; y recién en este actuado se convocó al Vocal dirimidor, Juan Carlos Berrios Albizú,
Presidente de la Sala Civil Segunda, a cuyo efecto el oficial de diligencias el mismo día intentó
practicar la diligencia; empero, dicho vocal se negó a recibirla informando que hay un orden de
convocatoria en un libro (fs. 39); situación que dio lugar al decreto de 24 de febrero del mismo año,
donde se toma en cuenta la representación realizada y siendo que los Vocales de las Sala Penales
concluyeron su Comisión, procedieron a convocar al Vocal dirimidor, Fernando Ganam Cortez,
Presidente de la Sala Penal Segunda del mismo Tribunal, efectivizándose la diligencia respectiva el
28 de febrero del año en curso (fs. 42); al respecto el Vocal convocado a dirimir emitió su voto, sin

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1217


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

consignar la fecha de su pronunciamiento; en consecuencia, considerando la posición del Vocal


dirimidor, la Sala Penal Segunda emitió la Resolución 14/2012 el 29 de febrero (fs. 44 a 45 vta.).

En ese entendido, se puede advertir que en el presente caso la Sala Penal Segunda, ha emitido la
Resolución después de doce días de celebrada la audiencia; por lo que conforme al Fundamento
Jurídico III.2 de la presente Sentencia Constitucional, el Tribunal de garantías, debería tomar en
cuenta las características esenciales de esta acción, como ser entre otras, la sumariedad y el principio
de celeridad que permiten que la misma sea tramitada rápidamente; es más, por ninguna razón dicha
audiencia podía ser suspendida ya que la norma que rige a esta acción de libertad indica claramente,
que se debe dictar Resolución en la misma, a pesar de existir dos posiciones encontradas a momento
de llevarse a cabo, el requerimiento del Vocal dirimidor debió ser ejecutado de manera inmediata con
el fin de no incurrir en dilaciones que van contra las características esenciales de la acción de libertad.

III.4.4. En cuanto a la remisión de la acción de libertad ante el Tribunal Constitucional Plurinacional,


en el caso estudiado, se extraña que la Sala Penal Segunda, hubiere remitido el expediente en revisión
a este Tribunal, el 12 de marzo del mismo año, -conforme a la nota de atención de 6 de marzo de
2012, cursante a fs. 47-; no obstante que la Resolución de la acción de libertad, fue pronunciada por el
Tribunal de garantías el 29 de febrero del citado año; por lo que, advirtiéndose la negligencia de la
Sala referida y probablemente el desconocimiento de las normas señaladas en el Fundamento Jurídico
III.3 del presente fallo, contraviniendo al principio de celeridad que caracteriza principalmente a la
acción de libertad, ocasionado un retraso en la revisión de este caso por parte del Tribunal
Constitucional Plurinacional, situación que en adelante debe ser tomada en cuenta, siendo que se
señala expresamente que es una norma obligatoria y en ninguna circunstancia se puede permitir
retardaciones en su envió.

Por lo expuesto, se colige que en el presente caso, asisten dos elementos que dieron lugar a la
vulneración de los derechos del accionante, por un lado las autoridades demandadas y por otro la
actuación procesal del Tribunal de Garantías; en ese sentido se puede establecer concretamente que
las autoridades -ahora demandadas-, deberían tomar en cuenta la defensa técnica del accionante y no
incurrir en consecuencia en otra vulneración, como ser la privación de la libertad; asimismo, el
Tribunal de garantías, en lo concerniente a la convocatoria del Vocal dirimidor y el tiempo de
remisión de expediente ante el Tribunal Constitucional Plurinacional, no cumplió con los plazos
procesales determinados en la Constitución Política del Estado y la Ley del Tribunal Constitucional
Plurinacional; por tanto, incurrió en negligencias que ocasionaron dilaciones en el proceso, situación
por la que el Tribunal Constitucional Plurinacional con el objeto de ejercer el control de
constitucionalidad, además de ingresar al análisis de fondo y resolver el acto lesivo denunciado,
observa los defectos procesales en los que actuó dicho Tribunal; por lo que corresponde, conceder la
tutela solicitada.

En consecuencia el Tribunal de garantías, al conceder la tutela pedida, ha actuado correctamente.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le confiere


la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal
Constitucional Plurinacional, en revisión resuelve:

1º APROBAR la Resolución 14/2012 de 29 de febrero, cursante de fs. 44 a 45 vta. vta., dictada por la
Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz; y en consecuencia,
CONCEDER la tutela solicitada, a efectos de que se lleve a cabo la audiencia, con la respectiva defensa
técnica.
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1218
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

2º Llamar la atención al Tribunal de garantías, por la dilación en la tramitación del voto disidente,
advirtiendo que de reiterarse tal actuación, se remitirá antecedentes al Consejo de la Magistratura o al
Ministerio Público.

3º El Tribunal de garantías, dispuso que las autoridades demandadas, emitan una nueva Resolución en el
plazo de setenta y dos horas; al respecto, corresponde aclarar que en virtud al principio de celeridad la
Sala Penal Tercera, debe resolver de manera inmediata, la apelación referida.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez-Magistrada


Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños-Magistrada
INDICE CONTROL DE INDICE RAMA DEL DERECHO INDICE DE JURISPRUDENCIA
INDICE GENERAL
CONSTITUCIONALIDAD MAYO I MAYO I MAYO I

SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0169/2012


Sucre, 14 de mayo de 2012

SALA SEGUNDA
Mag. Relatora: Dra. Mirtha Camacho Quiroga
Acción de amparo constitucional
Expediente: 00101-2012-01-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución SF-016/2012 de 14 de febrero, cursante de fs. 398 a 401 vta.,


pronunciada dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Juan Carlos
Mendoza Verduguéz contra Moisés Torres Chivé, Alcalde; Yerco Juan Pablo Arguedas
Arancibia, Director Jurídico; Verónica Berríos Vergara, ex Alcaldesa y Mark Salazar
Balderrama, ex Director Jurídico; todos del Gobierno Municipal Autónomo de Sucre.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 24 de enero de 2012, cursante de fs. 202 a 208 vta., el accionante
expresa los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

La Entidad Municipal de Aseo Urbano de Sucre (EMAS), dentro el marco de sus Estatutos y
Reglamentos internos, el 17 de enero de 2009 publicó una convocatoria de contratación de
personal para ocupar el cargo de Gerente General de esta Entidad, convocatoria en la que resultó
ganador, en cuyo mérito mediante memorándum 001/2010 de 2 de marzo, fue posesionado en el
cargo indicado; sin embargo, fruto de un apócrifo informe de auditoría, sobre la compra de tres
carros basureros, en el que supuestamente se estableció principios de responsabilidad en su
contra, el Directorio de EMAS presidido por Verónica Berrios Vergara ex Alcaldesa del
Municipio de Sucre, sin previo proceso decidió destituirlo, por lo que ante tal arbitrariedad,
interpuso los recursos administrativos previstos por la Ley del Procedimiento Administrativo,
logrando que el Concejo Municipal de Sucre dejase sin efecto su destitución, ordenando su

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1219


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

inmediata reincorporación, la cual no se hizo efectiva, debido a que se le inició un supuesto


proceso administrativo, que solo tuvo por objeto legalizar su destitución.

El merituado proceso se le inició mediante Resolución 01/2011 de 15 de abril, suscrito por el


Director Jurídico de EMAS, en su calidad de autoridad sumariante, acusándole de la omisión de
designación mediante Resolución expresa del Responsable de Procesos de Contratación,
omisión de cumplimiento a la cláusula décima del contrato (idioma) y puntos 24 y 25.J de las
especificaciones técnicas, referentes a cursos de capacitación; por lo que en su defensa y a
objeto de desvirtuar las supuestas faltas atribuidas, mediante memoriales de 28, 29 de abril y 6
de mayo todos de 2011, objetó la aptitud legal del Juez Sumariante además de presentar las
pruebas de descargo, las que no fueron valoradas y compulsadas, en la Resolución 002/2011 de
13 de abril, emitida por el Sumariante vulnerándose su derecho al debido proceso y a la defensa,
disponiéndose sin mayor fundamentación su destitución.

Ante la evidente vulneración del debido proceso, el 30 de mayo de 2011, interpuso recurso de
revocatoria contra la Resolución 002/2011, resuelta por Resolución 004/2011, de 9 de junio que
ratificó la decisión impugnada; ante este hecho vulneratorio a sus derechos, interpuso recurso
jerárquico, que fue resuelto por Resolución 02/2011 de 11 de julio, suscrita por Verónica Berrios
Vergara, quien confirma la Resolución 001/2011, emitida por el Director Jurídico constituido
como Sumariante en el proceso administrativo interno, Resolución que le fue notificada el 25 de
julio de 2011.

El accionante advierte que el art. 4 del Estatuto de EMAS claramente establece que ésta Entidad
se maneja bajo el principio de “descentralización autónoma”, es decir, que esta entidad goza de
autonomía de gestión y actúa como entidad descentralizada del Gobierno Municipal Autónomo
de Sucre, por lo que al haber sido designado como Gerente General de EMAS, se encuentra
sujeto a las normas y reglamentos internos de dicha entidad, por lo que debió ser procesado y
sancionado en el marco de esa normativa interna; sin embargo el Juez Sumariante, al dictar el
Auto de apertura de proceso disciplinario ignoró por completo el Reglamento Interno de EMAS,
cuyo contenido expresamente tipifica y sanciona las conductas que contravienen al mismo, es
decir, que el mencionado Auto de apertura incurre en la arbitrariedad de haber dispuesto el
inicio del proceso por la presunta comisión y contravención al ordenamiento jurídico
administrativo previsto en la referida norma municipal y no así por la presunta comisión y
contravención al ordenamiento jurídico administrativo interno de EMAS; por lo tanto, tal hecho
no cumple con el deber de tipificar el acto que supuestamente vulneró el ordenamiento
administrativo bajo el cual se encuentra regido por el principio de especificidad, que dentro de
los procesos administrativos sancionatorios es parte indisoluble del debido proceso; añade que
tal omisión no puede ser convalidada por la Resolución final 002/2011 de 13 de abril, dictada
por el Juez Sumariante, que de la misma manera sólo citó normativa de Decretos Supremos que
regulan la responsabilidad por la función pública, así como transcribe las normas del
Reglamento Interno de la municipalidad, imponiendo arbitrariamente a su parecer la sanción
más grave -la destitución-, que al ser ratificada en los mismos términos y con los mismos
fundamentos por la entonces Alcaldesa del municipio de Sucre, al resolver el recurso jerárquico
presentado por el accionante, mediante la Resolución 02/2011 de 11 de julio, cometió el mismo
acto indebido que el Juez Sumariante.

Sostiene además, que en el proceso seguido en su contra también se vulneró el debido proceso,
en su vertiente del juez natural, debido a que la entonces Alcaldesa, antes de conocer y resolver
el recurso jerárquico, prejuzgó el mismo hecho, acto que se demuestra cuando esta autoridad
procedió a destituirlo sin previo proceso, como se evidencia en la Resolución 11/2010, de 28 de
septiembre, que fue firmada por la mencionada ex autoridad como Presidenta del Directorio de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1220
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

EMAS y el memorándum del “28 de septiembre de 2010”; por este motivo, es claro que la ex
Alcaldesa se encontraba impedida de conocer y resolver el recurso jerárquico, ya que se
encontraba dentro de las causales de excusa que establece el art. 10 de la Ley de Procedimientos
Administrativo (LPA), “art. 26 de la Ley 2637” y el propio art. 24 del Reglamento de
Procedimientos Administrativos internos de la Honorable Alcaldía Municipal, que dispone que
el régimen de excusas se rige por la Ley de Abreviación Procesal Civil y de Asistencia Familiar,
que en su art. 3.9, establece como causa de excusa o recusación; “Haber manifestado su opinión
sobre la justicia o injusticia del litigio antes de asumir conocimiento de él”, afirmando que por
su parte no pudo recusarla en su momento debido a que no fue notificado con decreto alguno
sobre la radicatoria del recurso jerárquico presentado, además de que tampoco tenía
conocimiento de cuando ésta autoridad decidió asumir conocimiento de la causa, por lo que el
accionante, al no tener conocimiento de tales hechos, mediante memorial de 19 de julio de 2011
solicitó el archivo de la causa, siendo posteriormente notificado con la mentada Resolución, el
25 de julio del mismo año, pronunciada supuestamente el 11 del mismo mes, por la referida
autoridad, es decir, que se le notificó catorce días después de que se dictó la Resolución
02/2011.

Finalmente sostiene que la Resolución 02/2011 de 13 de abril, dictada por la Autoridad


Sumariante, así como la de 11 de julio del mismo año, dictada por el Juez Jerárquico, carece de
la fundamentación y la congruencia necesaria, debido a que no se explicaron los motivos por los
cuales se concluyó en ambas Resoluciones e instancias, la falta de prueba que desvirtúe los
documentos extrañados en el informe de auditoría y que fue motivo para el inicio del proceso
administrativo contra el accionante, a pesar de que este presentó abundante documentación de
descargo, sobre la cual no hubo una explicación de por qué la documental presentada no era
suficiente para desvirtuar los cargos presentados en su contra, a pesar de que ésta fue suficiente
para eximir a otras personas de responsabilidad, por lo que además recibió un trato
discriminatorio.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

El accionante alega la vulneración de sus derechos al debido proceso, al trabajo, a percibir una
remuneración y a ejercer una función pública, citando al efecto los arts. 14.1, 45, 46, 115.II,
117.1, 120.1, y 144.1 de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicita se le conceda la tutela y en consecuencia, deje sin efecto las Resoluciones; “001/2011;
02/2011 de 11 de julio; 004/2011 de 9 de junio y la Resolución 002/2011 de 13 de abril” y como
efecto de ello se ordene su inmediata restitución al cargo de Gerente General de EMAS con el
consiguiente pago de salarios y demás beneficios que le correspondan desde el momento de su
ilegal destitución, hasta su efectiva restitución más la imposición de pago de daños y perjuicios.
I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 14 de febrero de 2012, según consta el acta cursante de fs. 389
a 397 se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación de la acción

El abogado del accionante ratificó y reiteró los fundamentos de la demanda.

I.2.2. Informe de los demandados


GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1221
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Mark Michael Salazar Balderrama, en su condición de ex Director Jurídico del Gobierno


Autónomo Municipal de Sucre, mediante memorial, cursante de fs. 361 a 371 vta., señaló lo
siguiente: a) El accionante denunció que su persona actuó como Juez Sumariante, dentro del
proceso iniciado en su contra, sin tener la competencia legal para ello, es decir, que sus actos
serían nulos de pleno derecho, por lo que debió acudir al medio idóneo para plantear tal
extremo, que sería el recurso directo de nulidad y cumplir estrictamente con el principio de
subsidiariedad, cosa que no hizo, por lo que la acción de amparo constitucional planteada debe
rechazarse; b) Sostiene además que el accionante tampoco agotó la vía administrativa municipal,
al no haber solicitado la reconsideración; c) Dentro del proceso administrativo interno seguido
contra el accionante, se emitió la Resolución 002/2011, con la que fue notificado el 24 de mayo
de 2011, también el 30 del mismo mes y año, se notificó con decreto de la fecha antes referida,
aclarando que la Resolución 002/2011, es de 13 de abril de 2011, fallo que en su momento
consideró y valoró la prueba aportada por el accionante, lo que el mismo no ha desvirtuado de
manera fehaciente, argumentando en qué medida la valoración realizada por su parte fue
irrazonable, inequitativa o que no llegó a realizarse.

Ramiro Taboada Velásquez, en representación de la ex Alcaldesa del Gobierno Municipal


Autónomo de Sucre, Verónica Berrios Vergara, en audiencia, de manera oral, informó lo
siguiente: la presente acción de amparo constitucional, no cumplió con el principio de
subsidiariedad, por cuanto el ahora accionante tenía la posibilidad de presentar el recurso de
revocatoria, ante la Resolución del recurso jerárquico, por una parte, pero al cuestionar la
incompetencia la ex Alcaldesa en la emisión de la resolución administrativa, correspondía en
todo caso formular directamente el recurso directo de nulidad, por tal motivo no es posible
ingresar a analizar el fondo de la acción interpuesta, por lo que corresponde la denegación de la
presente acción de amparo constitucional.

Juan Pablo Arguedas, por sí y en representación del actual Alcalde del Gobierno Municipal
Autónomo de Sucre, presentó el testimonio de poder 100/2012, que fue observado por no
cumplir con el art. 12 de la Ley del Notariado (LN), por lo que no se aceptó la representación
por la autoridad demandada.

I.2.3. Intervención del tercero interesado

Roberto Udaeta España, a nombre de los miembros del Directorio de EMAS, expuso en forma
breve los antecedentes del proceso administrativo y solicitó la denegatoria de la acción de
amparo constitucional, presentada por incumplimiento del principio de subsidiariedad y porque
se debió formular recurso directo de nulidad por parte del accionante.

I.2.4. Participación del representante del Ministerio Público

La Fiscal María Beth Castro, en representación del Ministerio Público, manifestó lo siguiente:
De la suma de los antecedentes expuestos por ambas partes, efectivamente se puede constatar
que existió una infracción al debido proceso, en mérito a que este fue llevado a cabo sin una
tipificación previa de las faltas que el accionante supuestamente hubiere cometido, lo que incide
en una infracción al debido proceso, ya que el accionante no tenía conocimiento de cuál era la
gravedad de los hechos que se le estaba acusando y la correspondiente sanción que le aplicarían
en caso de encontrarle responsable de tales actos. A partir de los arts. 70, 71 y Ss. del
Reglamento Interno de EMAS se habla de faltas leves y graves, y cuando se debe proceder a la
suspensión de un funcionario, sin embargo la autoridad sumariante en la Resolución impugnada
se alejó del principio de tipicidad, ya que no se especificó que normas del Reglamento Interno se
habrían infringido por el accionante, y cuáles serían las aplicables dentro del presente caso;
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1222
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

añade además que la autoridad sumariante en ningún momento valoró adecuadamente las
pruebas de descargo presentadas por el accionante, aspecto que se repite en el fallo emitido por
la entonces Alcaldesa Municipal, evidenciándose de manera general una falta de motivación de
las Resoluciones dictadas en el caso en particular. Por lo que consideró que se debe declarar
procedente la acción de amparo constitucional presentada en lo que se refiere a los principios de
tipicidad y falta de motivación en los fallos impugnados y se le otorgue la tutela solicitada.

I.2.5. Resolución

La Sala de Familia, Niñez y Adolescencia y Violencia Intrafamiliar del Tribunal Departamental


de Justicia de Chuquisaca, constituido en Tribunal de garantías, pronunció la Resolución SF-
016/2012 de 14 de febrero, de fs. 398 a 401 vta., en la que se CONCEDE parcialmente la
tutela sólo en lo que se refiere a la Resolución de 02/2011 de 11 de julio, que resuelve el recurso
jerárquico, dejando sin efecto la misma, disponiendo que se dicte una nueva que resuelva el
referido recurso, con la debida motivación de acuerdo a todo lo demandado, aclarándose que
quedan vigentes las demás Resoluciones, sin que se restituya en el cargo al accionante, ni se le
devuelvan sus sueldos y salarios porque no corresponde ya que todavía está pendiente de
resolución su situación funcionaria; fundando su fallo en lo siguiente: a) Con relación al
principio del juez natural imparcial, resulta evidente que la entonces Alcaldesa, Verónica
Berríos Vergara, fue quien destituyó al ahora accionante, antes de que iniciara el proceso
administrativo en su contra, por lo que esta autoridad se encontraba dentro de las causales de
excusa para conocer un ulterior recurso jerárquico, interpuesto por el mismo actor, en el que
nuevamente le impuso la misma sanción de destitución, aunque en ésta ocasión dentro de un
proceso administrativo. Sin embargo, de acuerdo a la Ley de Abreviación Procesal Civil y de
Asistencia Familiar, la parte accionante pudo haber suscitado su recusación ya que tal extremo
era de su conocimiento, así no le hayan notificado con ningún proveído de radicatoria, por lo
cual la autoridad que debía resolver el recurso jerárquico era precisamente la máxima autoridad
ejecutiva (MAE), como así lo establece el art. 22 de ese reglamento y el art. 14 de los Estatutos
de EMAS; al no haber presentado recusación precluyó su derecho, no pudiendo reclamar éste
vía acción de amparo constitucional; b) Respecto al reclamo del accionante a que debió ser
objeto de proceso disciplinario aplicando el Reglamento Interno de EMAS, se debe tener
presente que la misma es una entidad descentralizada del Gobierno Municipal Autónomo de
Sucre, no una institución distinta, consiguientemente el accionante en su condición de Gerente
General de EMAS, es como cualquier funcionario público, no sometido a un sistema normativo
particular, sino a todo un conjunto de normas que conforman la materia administrativa. Por lo
tanto, si bien está sometido a los Reglamentos y Estatutos de esa Entidad, también está a la
normativa municipal por mandato del art. 55 de la Ley de Municipalidades (LM) y al marco
normativo de la Ley de Abreviación Procesal Civil y de Asistencia Familiar; c) Respecto a la
valoración de la prueba, tal extremo no fue reclamado en el recurso de revocatoria contra la
Resolución del Sumariante; empero, en el recurso jerárquico, si bien la autoridad demandada
afirma haber recibido la prueba de descargo presentada por el accionante, respecto a los hechos
por los que se le acusaba, referidos a la falta de capacitación y de entrega de manuales en el
idioma español, no hubo pronunciamiento alguno sobre estas pruebas, en cuanto a su validez, lo
que muestra la insuficiente motivación del fallo; y, d) Respecto al derecho al trabajo y a ejercer
una función pública, el accionante no ha establecido una clara relación de causalidad entre los
hechos vulneratorios y los derechos transgredidos, hecho similar acontece con la supuesta
transgresión al derecho a la igualdad denunciada, respecto a un trato discriminatorio a su
persona respecto a otras personas dentro del mismo caso, extremo que no fue probado por lo que
no se encuentra ningún acto vulneratorio de éste derecho.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1223


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. El 2 de marzo de 2010, mediante memorándum, se designó a Juan Carlos Mendoza


Verduguez como Gerente General, debido a que obtuvo el mayor puntaje en la Convocatoria
Pública 01/10 de 2 de marzo (fs. 1).

II.2. El 28 de septiembre de 2010, la entonces Alcaldesa y el Director Jurídico del Gobierno


Municipal Autónomo de Sucre, como parte integrante del Directorio de EMAS, emitieron la
Resolución 11/2010, mediante la cual retiraron la confianza del Gerente General de la referida
Entidad, determinando la aplicación del art. 22 del Reglamento y Estatutos de EMAS, que
señala: “en caso de manifestar incapacidad técnica, administrativa o moral, el directorio podrá
removerlos de su cargo y proceder a nombrar a un reemplazante”; procediendo a removerlo del
cargo de Gerente General de EMAS, al existir mayoría absoluta de votos en su contra por parte
del Directorio de la Entidad antes señalada (fs. 3 a 5).

II.3. El accionante ante su destitución, promovió recurso de revocatoria contra la referida


Resolución de Directorio, solicitando la revocatoria de la Resolución 11/2010 y su restitución a
su cargo; el directorio de EMAS, mediante la Resolución 12/2010 de 13 de octubre, determinó
confirmar totalmente la decisión recurrida; el 25 de octubre de 2010, el accionante interpone
recurso jerárquico; resuelto por el “Honorable Concejo Municipal” mediante Resolución
104/2011 de 9 de marzo, que llega a determinar que el accionante no es un servidor público de
libre nombramiento o contratación, debido a que entró a trabajar en EMAS, por un concurso de
méritos, por lo que para su remoción debe cumplirse con ciertas formalidades que hacen al
debido proceso, conforme a la normativa vigente, por lo que resolvió revocar las Resoluciones
de 12/2010 de 13 de octubre y 11/2010, disponiendo la reincorporación del ahora accionante a
sus funciones (fs. 6 a 9).

II.4. El 29 de marzo de 2011, el Directorio de EMAS, mediante Resolución 01/2011, en mérito


a la instrucción recibida por el Concejo Municipal de Sucre, resolvió restituir al accionante al
cargo de Gerente General de EMAS (fs. 10 a 11).

II.5. Ante el inicio de proceso interno en su contra, el accionante por memorial de 29 de abril de
2011 planteó la incompetencia de la autoridad sumariante, por ser una autoridad designada con
posterioridad a los hechos, por los que se le juzga y por que el informe de auditoría no cumplía
con los requisitos establecidos en el art. 3 de la Ley de Procedimiento Coactivo Fiscal (fs. 52 a
54 vta.).

II.6. El 13 de abril de 2011, el Director Jurídico del Gobierno Municipal Autónomo de Sucre,
dentro de la Resolución 001/2011, emitió el fallo en contra del ahora accionante, disponiendo su
destitución del cargo de Gerente General de EMAS, por la comisión y contravención al
ordenamiento jurídico administrativo (fs. 89 a 99).

II.7. El 30 de mayo de 2011, el accionante interpuso recurso de revocatoria contra la Resolución


002/2011, emitida por el Juez Sumariante sosteniendo que dicho fallo se dictó, sin ninguna
competencia ni jurisdicción, debido a que se basó en un procedimiento y reglamento que
establece la norma de carácter legal para el procesamiento de funcionarios de la Alcaldía
Municipal de Sucre, cuando su cargo era de Gerente General de EMAS; además denuncia que el
Juez Sumariante, dictó el fallo en fechas incongruentes y que incumplió los plazos procesales,
además de haber dictado la Resolución antes de que se le inicie el proceso. (fs. 67 y vta.); el 9 de
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1224
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

junio de 2011, el Director Jurídico del Gobierno Municipal Autónomo de Sucre, emitió la
Resolución ratificando el fallo impugnado de 13 de abril (fs. 101 a 108).
II.8. El 17 de junio de 2011, el accionante interpone recurso jerárquico contra la Resolución
002/2011, sosteniendo que tal autoridad no tiene competencia para conocer el proceso,
aludiendo que no estaba legítimamente constituido, además de existir, actuados que no
coinciden con los plazos procesales (fs. 72 a 74); el 11 de julio de 2011, mediante esa
Resolución, la entonces Alcaldesa del Gobierno Municipal Autónomo de Sucre, confirmó el
fallo emitido por el Director Jurídico, constituido como sumariante en la Resolución 004/2011
(fs. 110 a 126).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El accionante, denunció que las autoridades demandadas vulneraron su derecho al debido


proceso, al trabajo, a percibir una remuneración y a ejercer una función pública, en mérito a que,
producto de un defectuoso informe de auditoría interna, la ex Alcaldesa y el ex Director Jurídico
del Gobierno Municipal Autónomo de Sucre, lo destituyeron directamente del cargo de Gerente
General de EMAS, sin realizarle un proceso previo, sin que se haya tomado en cuenta que no es
un funcionario de libre designación, porque llegó al mencionado cargo ganando un concurso de
méritos; posteriormente, al ser obligados por el propio Concejo del Gobierno Municipal
Autónomo de Sucre a restituirlo a su cargo, las mencionadas ex autoridades procedieron a
iniciarle un proceso administrativo, con el único afán de legalizar su destitución. En
consecuencia corresponde determinar si los hechos denunciados son evidentes, a objeto de
conceder o denegar la tutela.

III.1. Naturaleza jurídica de la acción de amparo constitucional

De acuerdo a la previsión contenida en el art. 128 de la CPE, la acción de amparo constitucional


es un mecanismo de defensa contra actos u omisiones ilegales o indebidas de servidores
públicos, o de persona individual o colectiva que restrinjan, supriman o amenacen restringir o
suprimir derechos y garantías reconocidos por la misma Constitución y la ley. Ámbito de
protección que alcanza a la vulneración de Pactos y Tratados Internacionales en materia de
derechos humanos ratificados por el Estado, conforme se establece del tenor del art. 410 de la
CPE.

En este contexto, la acción de amparo constitucional se caracteriza por ser una acción
extraordinaria de tramitación especial y sumaria y esencialmente investida del principio de
inmediatez en la protección inmediata de los derechos y garantías vulnerados, no reconoce
ningún fuero, privilegio ni inmunidad respecto de las autoridades o personas demandadas.

Al respecto, la SCP 0002/2012 de 13 de marzo, en su fundamento jurídico III.1 precisó que: “


La acción de amparo forma parte del control reforzado de constitucionalidad o control tutelar
de los derechos y garantías, al constituirse un mecanismo constitucional inmediato de carácter
preventivo y reparador destinado a lograr la vigencia de los derechos fundamentales y
garantías constitucionales , siempre que no exista otro medio de protección o cuando las vías
idóneas pertinentes una vez agotadas no han restablecido el derecho lesionado, lo que significa
que de no cumplirse con este requisito, no se puede analizar el fondo del problema planteado y,
por tanto tampoco otorgar la tutela”.

III.2. La garantía del debido proceso en los procesos administrativos

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1225


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Sobre la observancia del debido proceso en la substanciación de procesos administrativos


sancionatorios, la SC 1480/2011-R de 10 de octubre, señaló lo siguiente:

“La importancia del debido proceso, a decir de la SC 0281/2010-R de 7 de junio '…está ligada
a la búsqueda del orden justo. No es solamente poner en movimiento mecánico las reglas de
procedimiento sino buscar un proceso justo, para lo cual hay que respetar los principios
procesales de publicidad, inmediatez, libre apreciación de la prueba; los derechos
fundamentales como el derecho a la defensa, a la igualdad, etc., derechos que por su carácter
fundamental no pueden ser ignorados ni obviados bajo ningún justificativo o excusa por
autoridad alguna, pues dichos mandatos constitucionales son la base de las normas adjetivas
procesales en nuestro ordenamiento jurídico, por ello los tribunales y jueces que administran
justicia, entre sus obligaciones, tienen el deber de cuidar que los juicios se lleven sin vicios de
nulidad, como también el de tomar medidas que aseguren la igualdad efectiva de las partes'.

En ese sentido la citada Sentencia precisó que el derecho al debido proceso no solamente es
exigible dentro de los procesos judiciales, sino que también abarcan a los procesos
administrativos, jurisprudencia que no contradice los principios constitucionales; y que por lo
tanto, es compatible con la Constitución vigente; y que, además ha sido reiterada recientemente
en la jurisprudencia de la presente gestión, específicamente en la SC 0014/2010-R de 12 de
abril, establece lo siguiente: '…la Constitución Política del Estado en consideración a la
naturaleza y los elementos constitutivos del debido proceso como instituto jurídico y mecanismo
de protección de los derechos fundamentales, lo consagra como un principio, un derecho y una
garantía, lo que implica que la naturaleza del debido proceso está reconocida por la misma
Constitución en su triple dimensión: como derecho fundamental de los justiciables, como un
principio procesal y como una garantía de la administración de justicia'.

Bajo este criterio la SC 0171/2010-R de 5 de mayo concretiza este razonamiento expresando:


“La garantía consagrada por el art. 16 de la CPE abrg, actualmente 115.II de la CPE,
reconocido como derecho humano en los arts. 8 del Pacto de San José de Costa Rica y 14 del
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, ha sido entendida por este Tribunal en su
uniforme jurisprudencia básicamente como: “ el derecho de toda persona a un proceso justo y
equitativo en el que sus derechos se acomoden a lo establecido por disposiciones jurídicas
generalmente aplicables a todos aquellos que se hallen en una situación similar…comprende el
conjunto de requisitos que deben observarse en las instancias procesales, a fin de que las
personas puedan defenderse adecuadamente ante cualquier tipo de acto emanado del Estado
que pueda afectar sus derechos”.

En este mismo sentido la SC 1863/2010-R de 25 de octubre preciso: ”El proceso administrativo,


debe hallarse impregnado de todos los elementos del debido proceso, que deben ser respetados
en su contenido esencial en cuanto al juez natural, legalidad formal, tipicidad y defensa
irrestricta”. Entendimiento que concuerda con la doctrina del derecho sancionador
administrativo cuando se afirma: “Que este no tiene esencia diferente a la del derecho penal
general, y por ello se ha podido afirmar que las sanciones administrativas se distinguen de las
sanciones penales por un dato formal, que es la autoridad que las impone, es decir sanciones
administrativas la administración, y las sanciones penales los tribunales en materia penal.”
(García de Enterría, E. y Fernández, T.R., Curso de Derecho Administrativo, II, Civitas, Madrid,
1999, pág. 159).

De la jurisprudencia y doctrina citadas, se infiere que la observancia del debido proceso se


constituye en una garantía para todo ciudadano que se encuentre sometido a un proceso en
el ámbito judicial o administrativo, que se traduce en el hecho de que el Tribunal o
GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1226
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

autoridad administrativa preserve esta garantía de manera obligatoria e insoslayable en


las diferentes etapas de un proceso, sometiéndose a disposiciones de naturaleza adjetiva
aplicables al caso concreto; derecho instituido por el art. 115.II de la CPE que establece
imperativamente que: “El estado garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa, y a una
justicia plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones”.

III.3. Sobre el derecho al trabajo, a percibir una remuneración justa y al ejercicio de la


función pública.

Sobre el derecho al trabajo y a percibir una remuneración, la SC 0325/2010-R de 15 de junio,


estableció lo siguiente: “En cuanto al derecho del trabajo el art. 46.I.1 de la CPE establece
que: 'Toda persona tiene derecho: Al trabajo digno, con seguridad industrial, higiene y salud
ocupacional, sin discriminación, y con remuneración o salario justo, equitativo y satisfactorio,
que le asegure para sí y su familia una existencia digna'; a su vez el art. 23 de la Declaración
Universal de los Derechos Humanos señala: Que toda persona tiene derecho al trabajo, a la
libre elección de su trabajo en condiciones equitativas y satisfactorias que le asegure a ella,
como a su familia, una existencia conforme a la dignidad humana”. Complementando este
razonamiento respecto del derecho a percibir una remuneración la Jurisprudencia Constitucional
ha sido uniforme en sostener que: “Consiste en la potestad o facultad que tiene toda persona de
recibir una remuneración o contraprestación adecuada conforme al trabajo desarrollado, es
decir un salario equitativo e igual por trabajo de igual valor. Empero este derecho es
concurrente al derecho al trabajo, no es independiente de este último, toda vez que se genera y
se constituye en el momento que la persona desarrolle una actividad o trabajo por cuenta de
otra persona o del propio Estado” (SC 0874/2010-R de 10 de agosto).

Con relación al ejercicio de la función pública la jurisprudencia del Tribunal Constitucional


mediante la SC 0980/2010-R de 17 de agosto concluyó que: “El derecho a ejercer una función
pública se encuentra íntimamente ligado al derecho a la ciudadanía, que estaba previsto el art.
40 de la CPE abrg. Y ahora en la Constitución vigente se encuentra en el art. 144, normas en
las que se establecen los dos elementos constitutivos de la ciudadanía: en primer lugar consiste
en el derecho de concurrir como elector o elegible y el segundo es el derecho al ejercicio de
funciones en los órganos del poder público; y como consecuencia de ello se establece el derecho
a ejercer funciones públicas sin otro requisito que la idoneidad, salvo las excepciones
establecidas por ley”.

Concretizando estos derechos y relacionados estrictamente a personas que mantienen una


relación laboral con entidades públicas genéricamente denominados servidores públicos;
podemos afirmar que ambos derechos concurrentes se preservan en tanto, el funcionario o
trabajador cumpla con sus funciones acorde a las disposiciones de carácter interno y
demás disposiciones del ordenamiento jurídico nacional, caso contrario se justifica la
imposición de una sanción o en definitiva una desvinculación laboral con el único requisito
de que esta medida sea adoptada previo proceso administrativo substanciado en el ámbito
del debido proceso y de las garantías procesales.

En este contexto la SC 0643/2010-R de 19 de julio determinó que: ”Los procesos


administrativos, surgen de la acción u omisión de los servidores públicos a alguna norma
preestablecida, conducta determinada como antijurídica, que da lugar a la responsabilidad por
la función pública, que a su vez tiene su génesis en el principio de responsabilidad que es un
término recientemente introducido a nuestro universo jurídico administrativo, que pretende
transmitir los conceptos que el termino ingles conlleva: ¡) Responsabilidad ante la comunidad;

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1227


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

¡¡) Rendición de cuentas que no sean necesariamente en dinero; y ¡¡¡) Compromiso moral y
legal ante otros”.

III.4. Análisis del caso concreto

Dentro del presente caso, el accionante alega que las autoridades demandadas, específicamente,
la ex alcaldesa y el ex Director Jurídico del Gobierno Municipal Autónomo de Sucre, vulneraron
su derecho al debido proceso, al trabajo, a percibir una remuneración y a ejercer la función
pública, en mérito a que se le siguió un proceso administrativo cuando las mencionadas
autoridades, ya habían emitido pronunciamiento previo sobre su caso al haberlo destituido sin
proceso administrativo alguno, además de aplicar normas que no se acomodaban a su cargo, ya
que él no es un funcionario municipal, sino el Gerente General de EMAS, y por último, las
referidas autoridades no valoraron la prueba que el accionante presentó como descargo de los
hechos de los cuales se le acusaba.

Precisados los hechos motivo, de la presente acción de amparo constitucional, que en concepto
del accionante vulneran sus derechos y garantías constitucionales; del análisis y compulsa de los
antecedentes que cursan en obrados, se establece que, si bien el accionante mediante Resolución
11/2010 pronunciado por el Directorio de EMAS fue destituido de las funciones que venía
desempeñando; sin embargo ésta Resolución como emergencia de un recurso jerárquico
interpuesto por el mismo accionante fue revocada por el Concejo Municipal de Sucre, Entidad
que dejando sin efecto esta destitución, disponiendo alternativamente su inmediata
reincorporación, por lo que de haber existido alguna irregularidad en esta medida; la misma fue
reconducida por el Concejo Municipal de esa Entidad, en el marco de su atribuciones, en tal
circunstancia el hecho señalado, no merece pronunciamiento alguno por este Tribunal.

Posteriormente el accionante fue sometido a proceso administrativo, en virtud de un informe de


auditoría interna practicado por la unidad especializada de la propia entidad, proceso que fue
sustanciado en el marco de las previsiones contenidas en la Ley de Administración y Control
Gubernamentales y DS 23318-A modificado por el DS 26237, dada la condición del accionante
de funcionario de una Entidad de servicio público vinculada a la administración del Gobierno
Municipal Autónomo de Sucre como es EMAS; consecuentemente los actos de administración
de esta Entidad se encuentran en los alcances de la. Ley de Administración y Control
Gubernamentales. Aclarado este aspecto, de las Resoluciones administrativas que forman parte
del proceso interno al que fue sometido el accionante, se advierte que estas actuaciones en el
orden procesal se hallan enmarcadas en la normativa establecida en el DS 23318-A modificado
por el DS 26237, proceso en cuya substanciación se preservó la garantía del debido proceso en
sus elementos de tipicidad, juez natural, derecho a la defensa y fundamentación de las
resoluciones, como se infiere del Auto de apertura de proceso cursante de fs. 76 a 82, actuado en
el que se consigna las faltas por las cuales el ahora accionante fue sometido a proceso
disciplinario, dentro del cual utilizó los mecanismos de impugnación que franquea la ley, por lo
que ejerció su derecho a la defensa en forma amplia sin que lograra desvirtuar las faltas
atribuidas que en definitiva determinaron su destitución, conforme se establece de las
Resoluciones 002/2011, 004/2011, 004/2011 y 02/2011, cursantes de fs. 84 a 99, 101 a 108 y
110 a 126, esta última que resuelve el recurso jerárquico confirmando la destitución del
accionante de las funciones que desempeñaba en EMAS dispuesta por el sumariante, de cuyo
contenido se establece que este actuado administrativo cuenta con la debida fundamentación y
congruencia necesaria, aspecto que no fue advertido correctamente por el Tribunal de garantías.

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1228


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

Por el antecedente descrito corresponde hacer referencia a la previsión contenida en el art. 29 de


la Ley de Administración y Control Gubernamentales que establece: “La responsabilidad es
administrativa cuando la acción u omisión contraviene el ordenamiento jurídico administrativo y
las normas que regulan la conducta funcionaria del servidor público. Se determinará por proceso
interno de cada entidad que tomara en cuenta los resultados de la auditoria si la hubiere. La
autoridad competente aplicará, según la gravedad de la falta, las sanciones de multa hasta un
veinte por ciento de la remuneración mensual; suspensión hasta un máximo de treinta días, o
destitución”. En este antecedente y al haberse dispuesto la destitución del ahora accionante
previo proceso interno, se concluye que la autoridad ejecutiva procedió conforme a derecho.

Que, la citada ley regula los Sistemas de Administración y de Control de los recursos del Estado
y su relación con los sistemas nacionales de Planificación Inversión Pública, con el objeto de:

“c) Lograr que todo servidor público, sin distinción de jerarquía, asuma plena responsabilidad
por sus actos rindiendo cuenta no solo de los objetivos a que se destinaron los recursos públicos
que le fueron confiados sino también de la forma y resultado de su aplicación.

d) Desarrollar la capacidad administrativa para impedir o identificar y comprobar el manejo


incorrecto de los recursos del Estado”.

En ese marco, todo servidor público responde de los resultados emergentes del desempeño de las
funciones, deberes y atribuciones asignadas a su cargo. Presumiéndose la licitud de las
operaciones y actividades realizadas por todo servidor público, mientras no se demuestre lo
contrario.

En consecuencia, existiendo un proceso interno contra el accionante que concluyó en todas sus
etapas, en base a un informe de auditoría interna que estableció en forma clara y precisa los
hechos y actos que dieron lugar a la responsabilidad administrativa, que derivó en la destitución
del accionante previo proceso; se concluye que las autoridades ahora demandadas no vulneraron
los derechos y garantías alegados por el accionante.

Consiguientemente, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones y alcances


de la acción de amparo constitucional, por lo que el Tribunal de garantías, al haber concedido
parcialmente la tutela, no ha efectuado una adecuada compulsa de los antecedentes procesales,
debiendo haber denegado la tutela en su totalidad.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: REVOCAR la Resolución SF-
016/2012 de 14 de febrero cursante de fs. 398 a 401 vta., pronunciada por la Sala de Familia
Niñez, y Adolescencia y Violencia Intrafamiliar del Tribunal Departamental de Justicia de
Chuquisaca, y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Gualberto Cusi Mamani-Magistrado


Dra. Mirtha Camacho Quiroga-Magistrada

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1229


TRIBUNAL CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL_______________CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD TUTELAR

GACETA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL/MAYO 1232

También podría gustarte