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Investigación Ética

1. ¿Qué es ética?

La ética es una disciplina de la filosofía que estudia el comportamiento


humano y su relación con las nociones del bien y del mal, los preceptos
morales, el deber, la felicidad y el bienestar común.

La palabra ética proviene del latín ethĭcus, que a su vez procede del
griego antiguo ἠθικός (êthicos), derivado de êthos, que significa 'carácter' o
'perteneciente al carácter'.

La función de la ética como disciplina es analizar los preceptos de moral,


deber y virtud que guían el comportamiento humano hacia la libertad y la
justicia.

Para cumplir con su función, la ética se subdivide en un conjunto de


ramas especializadas. Entre las ramas de las éticas se reconocen las
siguientes:

 Metaética: estudia las teorías éticas en sí mismas y analiza los


significados atribuidos a las palabras éticas. Por ejemplo, a qué se refiere la
gente cuando habla del bien, de la felicidad o de lo deseable.
 Ética normativa o deontología: establece principios para guiar los
sistemas de normas y deberes en ámbitos de interés común. Por ejemplo,
la llamada regla de oro (tratar a los demás como nos gustaría ser tratados).
 Ética aplicada: analiza la aplicación de las normas éticas y
morales a situaciones concretas. Por ejemplo, la bioética, la ética ambiental,
la ética comunicacional, etc.

La ética se relaciona muy estrechamente con la moral, pero es diferente


a esta. Mientras la moral se refiere a normas adoptadas por tradición, la ética
es una disciplina que reflexiona sobre cuáles acciones serían correctas.

Por ello, en el lenguaje común, la ética también puede ser entendida


como el sistema de valores que guía y orienta el comportamiento humano
hacia el bien.
Ética y moral
La ética es diferente de la moral. Mientras la moral defiende el
cumplimiento de las normas surgidas de la costumbre, la ética defiende los
principios que guían el comportamiento, aunque desafíen la tradición.

En la filosofía, la ética analiza las acciones humanas y las normas, sin


limitarse a la moral, ya que no prescribe normas como tal.

La ética solo define normas explícitas para los profesionales en ejercicio


de sus funciones, a fin de garantizar que actúen correctamente cuando la moral
personal entre en conflicto con el deber profesional.

Por ejemplo, supongamos que un médico recibe a un asesino herido por


la policía como paciente de emergencias. Sus valores morales le hacen
reprobar al “paciente” y pensar que es injusto que él viva cuando ha matado a
tantas personas inocentes.

Sin embargo, el código ético de su profesión le obliga a hacer todo lo


posible por salvar su vida. Si lo deja morir deliberadamente, el médico puede
perder su licencia profesional. El cumplimiento del deber profesional se impone
sobre la moral del individuo.

Tipos de éticas

Si bien no existe una clasificación sistematizada de los tipos de ética,


podemos determinarlos según sus áreas de aplicación.

Ética profesional: es la ciencia normativa que estudia los valores,


principios, deberes y derechos que orientan cada profesión con base en la
responsabilidad. La ética profesional se concreta en el código de ética
profesional o código deontológico.

Algunos ejemplos de ética profesional son:

 Ética médica: refiere los valores que orientan al profesional de la


salud hacia el acto correcto, tomando en cuenta los riesgos y las
preocupaciones sociales. Un ejemplo es el juramento hipocrático.
 Ética jurídica: estudia los valores y principios que rigen la práctica
del derecho en todas sus instancias.
 Ética docente: ciencia que estudia los valores y principios que
rigen los deberes y derechos del docente en el ejercicio de su profesión.
 Ética científica: sistema de valores que orienta la práctica
científica en todas sus etapas (investigación y aplicación), apelando
especialmente a los principios de honestidad, integridad y responsabilidad
social y ambiental.
 Ética militar: regula los límites y alcances de la acción militar.
Entre ellos, regula el uso de la fuerza bélica en el cumplimiento del orden
ciudadano y gubernamental.

Ética empresarial: son los principios y valores que regulan las acciones y
actividades de una empresa. Por ejemplo, evitar la competencia desleal,
proteger el medio ambiente, ofrecer productos de calidad, promover un
ambiente laboral saludable y no incurrir en publicidad engañosa.

Ética laica o ética secular: conjunto de valores y principios que guían la


conducta humana, basados en virtudes intelectuales como la empatía, el
pensamiento racional y la lógica.

Ética religiosa: principios que ordenan el comportamiento humano con


base en virtudes espirituales y conceptos trascendentales, tales como el sumo
bien, la Verdad, el alma, la justicia, el orden primordial, el amor, etc. Difiere de
una religión a otra.

Ética ambiental o ética del ambiente: es una parte de la ética aplicada


que considera el cuidado del medioambiente con el alcance del bien común. Es
transversal a diferentes disciplinas como la ecología, la economía, el derecho,
etc.

Origen de la ética
Los antecedentes de la ética se remontan a la Antigua Grecia. Sócrates
es considerado el padre de la ética, ya que todo su pensamiento giró en torno a
la noción del Bien. Platón también dedicó buena parte de su obra al Bien, la
Verdad y su papel en la República.

Sin embargo, Aristóteles fue el fundador de la ética propiamente dicha.


La ética como disciplina nace con su obra Ética para Nicómaco, en donde el
autor sistematiza por primera vez la relación entre la ética social e individual;
las normas y los bienes, y la teoría y la práctica. Asimismo, clasifica las virtudes
en intelectuales y morales.

Por ende, la ética es posterior a los sistemas de normas como las leyes
de Hammurabi o los Diez Mandamientos de Moisés. La disciplina de la ética
surgió, justamente, para reflexionar sobre la relación entre el comportamiento
de los seres humanos, el sistema de leyes morales y la idea del Bien que los
orienta.

2. ¿Qué es libertad?

Libertad es la facultad o capacidad del ser humano de actuar según sus


valores, criterios, razón y voluntad, sin más limitaciones que el respeto a la
libertad de los demás.

Hay libertad cuando las personas pueden obrar sin coacción y opresión
por parte de otros sujetos. Por ello, se dice que un individuo está en libertad o
actúa en libertad cuando no está en condición de prisionero, sometido a las
órdenes de otros o bajo coacción.

La libertad conlleva un sentido de responsabilidad individual y social. Por


lo tanto, existe una relación entre la libertad y la ética, ya que actuar en libertad
no es dejarse llevar por los impulsos, sino obrar con conciencia en pro del bien
propio y común.

La libertad es un concepto construido por la sociedad para alcanzar una


convivencia plena y constructiva. En este sentido, se encuentra consagrada en
la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

También se utiliza la palabra libertad para referirse a la facultad que


tienen los ciudadanos para actuar según su voluntad e intereses propios en el
marco de la ley.

La palabra deriva del latín libertas y libertātis, que significa ‘el que
jurídica y políticamente es libre’. Antiguamente, el término aludía al que había
nacido libre o al que había obtenido la libertad, tras haber nacido bajo
esclavitud o vasallaje.

Características de la libertad
 Se opone a la opresión: la libertad se caracteriza por oponerse a
los sistemas de opresión creados por los seres humanos para controlar e
instrumentalizar a sus iguales. Se opone a la esclavitud, la servidumbre
forzada, la coacción, la manipulación, el chantaje, la amenaza y la vigilancia
constante.
 Implica autodeterminación: la libertad implica el derecho a decidir
por sí mismo acerca de sus intereses, creencias, opiniones y acciones.
 Es un derecho humano: la libertad se defiende como un derecho
humano fundamental en la medida en que respetarla es garantía de paz,
bien común y progreso individual y social.
 Es un acto de responsabilidad: la persona libre es responsable de
sus propios actos y necesidades, pero también de las consecuencia de sus
acciones ante la sociedad.
 Es un valor: como valor, el ideal de la libertad orienta las acciones
humanas hacia el diálogo, la comprensión, el respeto y la tolerancia. La
libertad inspira la construcción de un modelo de sociedad abierta y
democrática, que aspira a la paz.
 Tiene límites: la libertad de una persona encuentra sus límites en
el derecho a la libertad de los otros. El ejercicio de la libertad no nos exime
de la obligación de atender nuestras necesidades básicas.
 Requiere disponer de buena información: un buen ejercicio de la
libertad pasa por tener a mano toda la información necesaria para hacer las
mejores elecciones. Mientras más informada está la persona, más
elementos tiene para evaluar la toma de decisiones.

Tipos de libertad
Libertad de culto o libertad religiosa
La libertad de culto o libertad religiosa se refiere al derecho para escoger
un sistema de creencias religiosas y manifestarlo sin castigo, amenaza o
coacción. Incluye la libertad de declararse ateo.
Por ejemplo, elegir libremente ser cristiano o musulmán; guardar las
fiestas sagradas sin penalización; vivir de acuerdo a las normas de la propia
religión siempre que no falten al bien común, etc.

La libertad de culto también está establecida en el artículo 18 de la


Declaración de los Derechos Humanos. En cada país existe una legislación
que establece de qué manera se permite o limita su expresión.

Libertad de expresión o de opinión


La libertad de expresión consiste en el derecho a expresar ideas,
opiniones y sentimientos dentro de las normas del respeto y la sana
convivencia. Está consagrada en el artículo 19 de la Declaración de los
Derechos Humanos.

Algunos ejemplos de libertad de expresión son la publicación de obras


literarias, la participación en los debates públicos y la libertad de prensa.

Cada país tiene leyes que regulan la libertad de expresión. Esta supone
ciertos límites, especialmente en lo que respecta a los medios de comunicación
y su responsabilidad social.

Por ejemplo, las leyes regulan la libertad de expresión al prohibir la


apología de la violencia o la incitación al odio, lo cual está penalizado por la ley.

Libertad de prensa
La libertad de prensa consagra el derecho de los medios de
comunicación a divulgar información oportuna y veraz a la población sin la
censura del Estado u otros factores de poder. La libertad de prensa es una
forma concreta de libertad de expresión.

La libertad de prensa debe ser defendida constantemente, ya que se


encuentra amenazada tanto por los poderes políticos, como por los poderes
económicos que usan el patrocinio como factor de coacción.

Son ejemplo de libertad de prensa la redacción y publicación de noticias


polémicas, editoriales y artículos de opinión.
Libertad de pensamiento
La libertad de pensamiento se refiere al libre ejercicio de la reflexión, la
conciencia y el sistema de creencias. También incluye la libertad de
manifestarlas pública y privadamente sin penalización. Por ejemplo, manifestar
una opinión política contraria a la de un colega o un grupo con plena confianza.

Libertad política
Toda persona tiene derecho a participar en la actividad política de su
país. Este derecho puede ser ejercido de manera directa (como funcionario
público) y de manera indirecta (a través del voto universal, libre y secreto).

Este derecho está consagrado en el artículo 21 de la Declaración


Universal de los Derechos Humanos. Sin embargo, la libertad política no existe
en los países que sostienen regímenes autoritarios y antidemocráticos de
diferentes tipos.

Libertad de elección
La libertad de elección se refiere al derecho a elegir entre diversas
opciones sin coacción de las autoridades, otros entes o particulares. Por
ejemplo:

Libertad de asociación
La libertad de asociación refiere al derecho de reunión y asociación entre
personas a fin de desarrollar actividades económicas, políticas, ciudadanas,
culturales o de otra índole, siempre que sean pacíficas. Está consagrada en el
artículo 20 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Por ejemplo, sindicatos, asociaciones civiles con o sin ánimos de lucro,


formación de partidos políticos, etc.

La libertad de asociación incluye el derecho de no pertenecer a ninguna


asociación.

Libertad de tránsito
La libertad de tránsito o de circulación se refiere al derecho de
trasladarse de un territorio al otro. Incluye el derecho a cruzar fronteras
internacionales y a regresar al propio país, siempre y cuando se cumplan las
normas internacionales.
La libertad de tránsito está consagrada en el artículo 13 de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Libertad económica
La libertad económica consagra el derecho de los individuos a trabajar,
invertir, lucrar y administrar sus bienes de acuerdo a sus intereses, sin
menoscabo de los derechos de los demás. Por ejemplo, libertad para crear
empresas.

Libertad financiera
La libertad financiera se refiere al estilo de vida que resulta de obtener
ingresos recurrentes (llamados también ingresos pasivos o residuales), en vez
de vivir de ingresos por salario u honorarios (ingresos lineales).

Esto supone la absoluta independencia en el manejo del tiempo


personal. Un ejemplo de libertad financiera es vivir del rendimiento de las
acciones de una empresa o del cobro de derechos de autor.

Este sentido de la libertad es muy restringido, ya que se limita a la mera


independencia laboral y, en la práctica, no es generalizable a todos los seres
humanos.

El concepto también involucra algunas polémicas. Por ejemplo, que un


individuo goce de libertad financiera implica que otras personas trabajan para
producir la riqueza que lo sostiene. Por ende, la libertad financiera no califica
como un derecho humano.

Libertad absoluta
Se entiende como libertad absoluta la total y completa independencia de
determinaciones externas al individuo, tales como la necesidad, las normas
establecidas o, incluso, las relaciones interpersonales.

Como tal, el concepto de libertad absoluta es utópico. Esto quiere decir


que es una idealización del concepto de la libertad. La idea de libertad absoluta
no tiene sustento en la realidad, ya que no reconoce la naturaleza propia de la
condición humana, siempre sujeta a condiciones ambientales, biológicas y
sociales.
El valor de la libertad
El valor de la libertad reside en que, gracias a ella, podemos expresar
nuestras ideas y opiniones en público, tener la educación que deseamos o
seguir las creencias con que nos identifiquemos, por nombrar algunos
ejemplos. Sin libertad, ninguna de estas cosas sería posible.

Pero no hay una libertad absoluta. Ejercemos la libertad teniendo


siempre en cuenta otros valores también importantes para vivir en sociedad,
como el respeto y la responsabilidad.

La libertad y el respeto
Nuestra libertad no puede pasar por encima de la libertad de los demás.
Por eso, el respeto a las opiniones y creencias de las otras personas es
fundamental a la hora de practicar nuestra libertad.

Por ejemplo, tenemos la libertad de ser ateos, pero eso no significa


despreciar a quienes sigan una religión, o impedir a otras personas que
practiquen sus cultos.

La libertad y la responsabilidad
Tener libertad también implica usarla con responsabilidad. La libertad no
consiste en hacer lo que nos apetezca, sino en elegir actos razonados y
responsables frente a las consecuencias que tengan para nosotros y para los
demás. Una libertad sin responsabilidad es libertinaje.

Por ejemplo, podemos entender que tenemos la libertad de llegar a una


clase a la hora que nos apetezca. Pero lo cierto es que las clases se fijan con
antelación para que todos puedan asistir. Llegar tarde afecta nuestro
rendimiento personal, nos hace ver irresponsables y causa distracción en los
compañeros. Asistir a la hora marcada es un acto de libertad responsable, pues
asegura a todos el derecho a una enseñanza de calidad.

¿Por qué la libertad es un derecho?


La libertad es un derecho. Fue reconocida por la comunidad
internacional en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948,
firmada en París poco después de la Segunda Guerra Mundial. Tiene sus
antecedentes en la Revolución francesa de 1789, y en los procesos de
abolición de la esclavitud, gestados desde el siglo XVIII hasta finales del siglo
XIX.

La libertad es consagrada como un derecho humano para protegerla.


Aunque todos los seres humanos nacemos libres e iguales, dotados de
conciencia y sujetos a la confraternización, siempre han existido situaciones
que ponen en peligro nuestra libertad.

Gobiernos dictatoriales o formas de esclavitud moderna son algunas de


las amenazas a la libertad que enfrentamos actualmente en diferentes lugares
del mundo.

Del derecho a la libertad se desprenden otros, como el derecho a la


educación, la familia, la asociación y la elección, y estos son imprescindibles
para el desarrollo social y el bienestar personal y colectivo.

Libertad y ética
La ética y la libertad están estrechamente relacionadas. La función de la
ética es, precisamente, conducir al ser humano hacia la felicidad y la libertad, a
través de la práctica consciente del Bien y la responsabilidad personal y social.

La ética reside en buscar el mayor bien posible, aun cuando a veces


desafíe las normas o leyes impuestas por tradición en la sociedad. Así,
anteponer el bien a la obediencia ciega requiere del ejercicio de libertad de
conciencia, pues acarrea una gran responsabilidad.

3. ¿Qué es responsabilidad?

Responsabilidad es dar cumplimiento a las obligaciones y ser cuidadoso


al tomar decisiones o al realizar algo. La responsabilidad es también el hecho
de ser responsable de alguien o de algo.

La cualidad de ser responsable significa cuidar de sí mismo y de los


demás, en respuesta a la confianza que las personas depositan entre nosotros.
Cuando somos responsables, estamos expresando el sentido de comunidad y
de compromiso que asumimos con los demás.
La responsabilidad es un valor y una práctica ética, ya que impacta en la
vida familiar, académica, laboral y ciudadana.

Una persona responsable cumple con sus deberes de manera oportuna


y eficiente. Por ejemplo, es responsable una persona puntual en su trabajo, que
lleva a cabo las tareas y objetivos asignados de la mejor manera posible.

También se dice que alguien es responsable cuando asume las


consecuencias de sus acciones. Por ejemplo, cuando una persona daña
accidentalmente un objeto ajeno y se dispone a repararlo o sustituirlo por uno
nuevo.

En derecho, la responsabilidad es la obligación legal de responder por


los daños que una acción genera a los demás, siempre en los términos
establecidos en la ley para cada caso.

La responsabilidad abarca muchos aspectos de la vida, por eso se habla


de diversos tipos de responsabilidad, como la responsabilidad civil, social,
fiscal, solidaria y limitada, entre otros.

Valor de la responsabilidad
El valor de la responsabilidad reside en que, gracias a ella, nos
cuidamos unos a otros y alcanzamos el desarrollo familiar, comunitario y social.
Cuando alguien no es responsable, no solo afecta su propio crecimiento, sino
que perjudica a los demás.

En la sociedad, se espera que las personas actúen de forma


responsable, ejerciendo sus derechos y cumpliendo sus obligaciones como
ciudadanos.

Por ejemplo, cuando un padre abandona a un hijo, afecta su crecimiento


emocional y lo expone a una vida más difícil. Pero cuando cuida de él con
cariño, el niño crece con autoconfianza y desarrolla mejor sus habilidades.

Del mismo modo, cuando el presidente de un país y su equipo de


gobierno no cumplen con sus obligaciones, se desata una crisis social. Al
contrario, cuando obran con responsabilidad, el país avanza.
Como vemos, hay situaciones o roles donde el nivel de responsabilidad
es mayor: un cargo político, un puesto de trabajo, ser padres o cuidar de
alguien.

La responsabilidad es también una cuestión ética, porque al cultivarla


contribuimos al bien común.

Ejemplos de responsabilidad
La responsabilidad es importante para el sano desarrollo personal,
familiar, comunitario y social. ¿Pero cómo se expresa en concreto? Veamos
algunos ejemplos.

 Responsabilidad con uno mismo: mantener la higiene personal,


alimentarse bien, leer para informarse.
 Responsabilidad en casa: participar en las tareas del hogar,
mantener el orden y la limpieza, estar atento a las necesidades comunes,
etc.
 Responsabilidad en la escuela: asistir a clases, entregar las
tareas a tiempo, estudiar con antelación y colaborar con las actividades
extraescolares.
 Responsabilidad con nuestros compromisos: ser puntual, cumplir
con la palabra dada, hacer lo que nos corresponde, dar el mejor esfuerzo.
 Responsabilidad ciudadana: informarse bien, votar, reparar los
daños causados a otros, pagar los impuestos, denunciar crímenes y delitos,
participar en actividades solidarias, cuidar el ambiente.

Tipos de responsabilidad
Responsabilidad civil
En derecho, la responsabilidad civil es la obligación de reparar el daño
que una persona ha causado a otra. La responsabilidad civil puede adquirirse
por contrato (contractual) o estar estipulada por ley (extracontractual).

Cuando la persona que responde por los daños es una persona diferente
al autor, se llama responsabilidad por hechos ajenos o responsabilidad civil
subsidiaria.
Responsabilidad social
Responsabilidad social es la carga, compromiso u obligación que los
miembros de una sociedad tienen entre sí y con la propia sociedad.

La responsabilidad social puede ser positiva, en el sentido de obligarse a


ejecutar determinadas acciones, o negativa, en referencia a abstenerse de
acometer determinadas acciones.

Se habla de tres tipos de responsabilidad social:

Responsabilidad social empresarial o corporativa

Es el compromiso y contribución voluntaria y activa de una empresa para


mejorar la sociedad, es decir, su compromiso con el desarrollo humano y
sostenible.

Abarca aspectos como brindar óptimas condiciones laborales a sus


empleados; ayudar a la comunidad local; dar aportes a las causas
humanitarias; contribuir con el cuidado del medioambiente y ofrecer productos
y servicios para el bien común.

Responsabilidad social gubernamental o pública

Es el compromiso de los gobiernos y entes del Estado para dictar y


regular leyes que procuren la justicia, el bienestar de los ciudadanos y el
cuidado del ambiente.

Responsabilidad social individual

Se refiere a las buenas prácticas ciudadanas que procuran el bien


común. Por ejemplo, colaboración en causas humanitarias; participación en las
elecciones; observancia de la ley; cuidado del medioambiente, etc.

Responsabilidad fiscal
Se llama responsabilidad fiscal a las acciones que toman los diferentes
organismos de un Estado en materia tributaria. Establecer quiénes y en qué
grado han causado daños a la hacienda pública, y establecer las sanciones
correspondientes.
Responsabilidad solidaria
La responsabilidad solidaria es la obligación o compromiso de una
empresa de responder ante sus trabajadores, en caso de que existan deudas
del contratista o subcontratista.

Este tipo de responsabilidad, por lo tanto, se aplica a varias personas


que responden ante una obligación contraída sin que sea necesaria una
declaración de insolvencia del agente principal. De este modo, el acreedor
puede reclamar la deuda contra una o todas las partes a la vez.

Responsabilidad limitada
Una sociedad de responsabilidad limitada (S.R.L.), o simplemente
sociedad limitada (S.L.), es un tipo de sociedad mercantil en la que la
responsabilidad se limita al capital aportado.

Por lo tanto, si existiesen deudas, los socios de este tipo de organización


no deben responder con su patrimonio personal. En este sentido, las
participaciones sociales no se corresponden con las acciones de las
sociedades anónimas (S.A.).

4. ¿Qué es respeto?

El respeto es un valor y una cualidad positiva que se refiere a la acción


de respetar; es equivalente a tener veneración, aprecio y reconocimiento por
una persona o cosa.

La palabra proviene del latín respectus, que traduce ‘atención’,


‘consideración’, y originalmente significaba ‘mirar de nuevo’, de allí que algo
que merezca una segunda mirada sea algo digno de respeto.

El respeto es uno de los valores morales más importantes del ser


humano, pues es fundamental para lograr una armoniosa interacción social. El
respeto debe ser mutuo y nacer de un sentimiento de reciprocidad.

Una de las premisas más importantes sobre el respeto es que para ser
respetado es necesario saber o aprender a respetar, a comprender al otro, a
valorar sus intereses y necesidades.
El respeto también debe aprenderse. Respetar no significa estar de
acuerdo en todos los ámbitos con otra persona, sino que se trata de no
discriminar ni ofender a esa persona por su forma de vida y sus decisiones,
siempre y cuando dichas decisiones no causen ningún daño, ni afecten o
irrespeten a los demás.

Respetar es también ser tolerante con quien no piensa igual que tú, con
quien no comparte tus mismos gustos o intereses, con quien es diferente o ha
decidido diferenciarse. El respeto a la diversidad de ideas, opiniones y maneras
de ser es un valor supremo en las sociedades modernas que aspiran a ser
justas y a garantizar una sana convivencia.

Muchas religiones abordan la cuestión del respeto hacia los demás,


porque es una de las reglas esenciales para tener una relación sana con el
prójimo.

El respeto como valor

El respeto es un valor moral. Los valores morales son principios creados


por la sociedad y la tradición con el fin de definir pautas correctas de
comportamiento general.

Sin respeto no tendríamos en cuenta la vida, opiniones y creencias de


los demás. Todo esto generaría caos y sería un paso atrás para la sociedad.
Por eso, cada vez que actuamos con respeto estamos contribuyendo a crear
un mundo mucho más justo y amable para vivir.

Respetar al otro solo por el hecho de ser humano, considerarlo un igual


aunque se vea, se exprese o piense diferente es una de las más altas
expresiones de respeto como valor moral.

El respeto se expresa en diferentes ámbitos: el comportamiento


ciudadano, la práctica religiosa, en el apego a las normas democráticas y en el
comportamiento en el entorno laboral.

Como valor cívico


El respeto es también un valor cívico. Los valores cívicos son las
conductas que se consideran correctas para el adecuado comportamiento
ciudadano. Son valores transmitidos por la comunidad y sus instituciones
sociales (la familia, la escuela, las leyes).

La reverencia a los símbolos patrios y el cuidado del medio ambiente


son ejemplos de respeto como valor cívico.

Como valor religioso


El respeto es un valor religioso esencial en la mayoría de las creencias.
Los valores religiosos son los principios que guían la conducta de las personas
que siguen una religión o dogma determinado.

Estas normas por lo general están descritas en textos sagrados o


fundamentales para dicha creencia, como es el caso de la Biblia, para los
cristianos o la Torá, para el judaísmo. Suelen coincidir con valores universales
como el respeto, la compasión, la obediencia y el amor.

“Honrar a los padres”, “respetar al prójimo”, el respeto a Dios y a las


autoridades (líderes, sacerdotes, predicadores, etc.) son ejemplos de respeto
como valor religioso.

Como valor democrático


El respeto es uno de los principios que sustenta la vida en democracia.
Los valores democráticos son los que ayudan a construir y mantener un
sistema de gobierno basado en la voluntad popular.

Los valores democráticos ayudan a fomentar relaciones equilibradas


entre el poder y los ciudadanos y le dan a estos últimos las pautas para
establecer una convivencia cívica.

Respetar las opiniones políticas de otros ciudadanos, aunque no sean


iguales a la nuestra, respetar al adversario político y acatar los resultados
electorales son ejemplos del respeto como valor democrático.

Como valor profesional


Los valores profesionales son los principios que una persona aplica en
su entorno laboral. Y el respeto es un valor profesional esencial, ya que
fomenta relaciones de trabajo basadas en la consideración del otro y de la
empresa para la cual trabaja.
Existen unos valores profesionales universales que aplican al ejercicio
de cualquier profesión, como la responsabilidad o el compañerismo. Sin
embargo, también existen valores profesionales de acuerdo a cada tipo de
profesión u oficio. En ese caso, se le llama deontología. Por ejemplo,
deontología médica, deontología jurídica, etc.

Un ejemplo de respeto como valor profesional es dirigirse a los


compañeros y jefes con educación y buenos modales.

Ejemplos de respeto

En la vida cotidiana podemos poner en práctica el respeto de muchas


formas. Estos son solo algunos ejemplos:

Respeto a uno mismo


El respeto comienza por la consideración a nosotros mismos. Debemos
tratarnos con la misma amabilidad con la que debemos respetar a otros. Solo
conociendo el autorrespeto podremos ser capaces de tratar a otros de la
misma forma.

Respeto a los padres


El respeto a los padres o cuidadores se expresa en tener consideración
hacia ellos, ser amables, educados, cumplir con nuestros deberes y acatar las
normas del hogar.

Respeto a los niños y a las personas mayores


Los niños y las personas mayores son grupos vulnerables que necesitan
ser tratados con gentileza, paciencia y dedicación. Se respeta a los niños y
ancianos escuchando y valorando su opinión, atendiendo sus necesidades y
protegiendo sus derechos.

Respeto al medio ambiente


Respetar el medio ambiente es mantener limpios los espacios que
utilizamos a diario, como la casa, la escuela, el trabajo y los lugares públicos.
Es también poner la basura en su lugar, reciclar y cuidar la naturaleza.
Respeto a las instituciones sociales
Las instituciones sociales son las organizaciones formales o naturales
esenciales para la vida en sociedad. El gobierno y la escuela son instituciones
formales y la familia es una institución natural.

Respetar las instituciones sociales significa cumplir con las normas que
cada una de ellas ha creado. Cuando los ciudadanos cumplen las leyes
dictadas por el gobierno, y los niños cumplen con sus obligaciones familiares y
escolares están respetando las instituciones.

Respeto a las diferencias


Las personas pueden tener rasgos físicos, creencias, costumbres y
tradiciones diferentes a las nuestras. Es justamente esa diversidad la que
enriquece a la sociedad, por lo tanto, es necesario tratar con respeto a quienes
luzcan, piensen o actúen diferente a nosotros.

Todas las personas somos valiosas y merecemos respeto.

Respeto a las normas


Las normas son códigos de comportamiento que debemos seguir en un
lugar determinado. Llegar a la escuela a una hora específica, ser solidarios con
los compañeros de clase y hacer silencio en el salón de clases son normas
básicas que hay que seguir para lograr una convivencia armónica entre
estudiantes y profesores.

Respeto a los símbolos patrios


El respeto a los símbolos patrios se expresa cantando el himno nacional,
conociendo la vida de los héroes patrios, honrando la bandera y el escudo
nacional, etc.

Los símbolos patrios forman parte de la identidad nacional. Por lo tanto,


expresar nuestro respeto es también mostrar consideración por nosotros
mismos y por quienes comparten nuestra nacionalidad.

5. ¿Qué es amor propio?


El amor propio es la aceptación, el respeto, las percepciones, el valor,
los pensamientos positivos y consideraciones que tenemos hacia nosotros
mismos y que puede ser apreciado por quienes nos rodean.

El amor propio depende de nuestra voluntad para querernos, no de


quienes están a nuestro alrededor ni de las situaciones o contextos en los
cuales no desenvolvemos.

El amor propio es el reflejo de cómo es la relación y los sentimientos que


tenemos por nosotros mismos, hacia nuestro físico, personalidad, carácter,
actitudes y comportamientos.

Cuando los individuos reconocemos el amor apropio, es porque se ha


alcanzado un equilibrio entre el estado anímico y nuestra autoestima. Ese
equilibrio se proyecta al exterior como un sentimiento de bienestar que se
expresa de diversas maneras y se goza.

En general, se dice que antes de amar a otra persona primero debemos


amarnos a nosotros mismo para así saber valorarnos, reconocer que
merecemos cosas buenas y bonitas a lo largo de la vida y que somos dignos
de amar y ser amados.

La felicidad es la meta principal del amor propio, ser felices por


aceptarnos como somos sin dejar que personas que sean externas y ajenas a
nuestra familia y círculo de seres queridos intervengan.

La familia y la educación son bases fundamentales para construir y


fortalecer el amor propio.

En el hogar, son los padres y seres queridos son quienes tienen la


responsabilidad de afianzar, desde temprana edad, la confianza en nosotros
mismos y de hacernos entender lo importante que es aceptarnos tal cual
somos, saber reconocer nuestras virtudes y defectos, fortalezas y debilidades.

Las personas que sienten amor propio se caracterizan por ser


amigables, respetuosas, amorosas, independientes, se preocupan por su
crecimiento personal, su estado de salud, su formación y dar lo mejor de sí en
todas las actividades que desarrollen, entre otros.
Amor propio y autoestima
Reconocernos, valorarnos, respetarnos, aceptarnos y superarnos cada
día forma parte de nuestra autoestima. Si no sentimos amor propio entonces
será muy difícil tener una alta autoestima.

La autoestima es el resultado de la evaluación y percepción que


tenemos de nosotros mismos, en pocas palabras, es el autoconocimiento.

La autoestima se puede mantener y alimentar con felicidad, ajustando el


concepto de nuestra forma de ser, de manera positiva, esto en especial cuando
se experimentan situaciones difíciles a lo lago de la vida, en especial, durante
la adolescencia. Esto forma parte de tener el control de nuestras vidas.

Cabe destacar que tener un alto autoestima o amor propio no es


sinónimo de egoísmo, vanidad o soberbia. Lo realmente importante es estar
bien con nosotros mismo y proyectar eso al exterior porque así seremos vistos
y percibidos.

Ahora bien, quien carece de autoestima también tiene escaso amor


propio, lo que es grave porque genera desconocimiento de quién es y qué
quiere, así como también produce tristeza, dependencia, inseguridad,
desvalorización, descalificaciones, irrespeto, entre otros sentimientos.

Vea también el significado de Autoestima y Las 8 imágenes que mejor


definen la autoestima.

Frases sobre el amor propio


A continuación, algunas frases de pensadores, escritores, actores, entre
otros, sobre lo que es el amor propio.

 “Tú mismo, así como cualquier otro en el universo entero,


mereces tu amor y afecto.” Buda (fundador del budismo)
 “No digas no puedo ni de broma, porque el inconsciente no tiene
sentido del humor, lo tomará en serio, y te lo recordará cada vez que lo
intentes.” Facundo Cabral (compositor argentino)
 “El amor propio es la fuente de todos los amores.” Pierre Corneille
(dramaturgo francés).
 “No hay nada noble en ser superior a otro hombre. La verdadera
nobleza está en sr superior a tu yo anterior.” Proverbio hindú
 “El amor propio no es el proceso de pasar por alto tus defectos. El
amor propio es expandir tu conciencia para incluir tus defectos y tus puntos
fuertes” Veronika Tugaleva (escritora ucraniana)
 “Cuando empecé a amarme a mí mismo, me liberé de todo lo que
no es bueno para mi salud: la comida, la gente, cosas, situaciones, y todo lo
que me trajo hacia abajo y lejos de mí mismo. En un primer momento llamé
a esta actitud ʽun sano egoísmoʼ. Hoy, sé que es ʽamor propioʼ.” Charlie
Chaplin (actor estadounidense)
 “En realidad son nuestras decisiones las que determinan lo que
podemos llegar a ser, mucho más que nuestras propias habilidades.” J. K.
Rowlling (escritora británica)
 “Siempre estás contigo mismo, por lo que también deberías
disfrutar de la compañía.” Diane Von Furstenberg (diseñadora de moda
belga)

6. Que es sexualidad?

La sexualidad es el conjunto de comportamientos y prácticas que


expresan el interés sexual de los individuos. Es un fenómeno natural, tanto en
los seres humanos como en otras especies animales. En el caso de los seres
humanos, se considera una parte constitutiva de la personalidad.

Por norma general, el ejercicio de la sexualidad en los animales se


relaciona con la reproducción de las especies, característica de los todos los
seres vivos. Para que la reproducción sea viable, debe haber presencia de dos
sexos: macho y hembra de la especie.

En el caso del ser humano la sexualidad es mucho más compleja, ya


que resulta de una combinación de factores biológicos y sociales de cada
individuo. Esta combinación ocasiona cambios en el cuerpo y la mente que
modelan el comportamiento sexual de las personas.
Franco García Mia Alexandra 3BMARH

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