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Este tipo de discurso es de utilidad ya que muchas veces al poner en voz alta lo que alguien
está sintiendo o pensando, le pude ayudar a reflexionar sobre ese tema en particular y hacer
que pueda encontrar una solución o entender mejor su pensar y sentir.
El soliloquio por lo general es en voz alta, a solas y puede verse como un dialogo interior.
Una de las principales características del soliloquio es que su pronunciamiento se realiza en voz
alta. Lo anterior significa que el mensaje es escuchado por la misma persona que lo emite o
por un receptor que no participa en lo expresado.
A solas
Este rasgo del soliloquio se refiere a la conversación o diálogo que un sujeto tiene con él
mismo. En este caso no se produce la retroalimentación o contestación que se da en una
comunicación habitual.
Subjetividad
Reflexivo
El carácter reflexivo de este tipo de expresión tiene como principal objetivo conocer a
profundidad el interior del sujeto que lo está aplicando. Un soliloquio saca a relucir un
sentimiento o pensamiento de forma coherente sobre una situación determinada.
El soliloquio y el monólogo
Como ya se dijo, la Real Academia Española tiene al soliloquio y al monólogo como sinónimos,
de hecho, ambos vocablos entran en lo que se conoce como “formas monologales”. Sin
embargo, hay una serie de diferencias que es necesario acotar entre ellos.
Primeramente, se entiende por monólogo uno de los géneros del teatro, así es conocido por
todos, mientras que el soliloquio trata de un discurso que realiza un personaje determinado
dentro de una obra teatral. Eso sí, aquí la diferencia es sutil, el soliloquio es aplicado como
monólogo, pero dentro de una obra teatral que lo abriga.
Otro detalle interesante que puede destacarse de las pequeñas diferencias que hay entre el
monólogo y el soliloquio, es que cuando este último ocurre, el personaje que lo va a llevar a
cabo se aparta de un grupo. Mientras que en el monólogo (como un género de obra teatral) el
personaje está solo.
SOLILOQUIOS
Después de que el rey Ricardo confiscara los bienes del difunto padre de Bolingbroke, éste
regresa de su destierro y organiza una revuelta en contra del rey. La rebelión crece y se hace
de aliados que otrora fueran fieles al monarca. Al enfrentar la inminencia de su derrota, el Rey
Ricardo le habla de esta manera a los cortesanos y aliados que aún lo acompañan.
REY RICARDO:
***
El rey Enrique IV enfrenta una revuelta organizada por un grupo de nobles liderados por
Northumberland y su hijo Percy. Falstaff, el amigo ladrón y disoluto del libertino príncipe Hal es
reclutado para luchar en contra de los rebeldes. Falstaff pide al príncipe que lo proteja en el
campo de batalla, a lo cual el joven responde que Falstaff le debe a Dios su muerte. El viejo
reacciona con esta disertación sobre el honor.
FALSTAFF:
No es hora aún. Me vería renuente a pagarle antes de Su hora. ¿Qué necesidad tengo de ser
tan arrojado con Aquel que aún no me llama? En fin, no importa, el honor me da espuela. Sí,
pero si el honor me clava la espuela cuando avance, ¿entonces qué? ¿Puede el honor sanar
una pierna? No. ¿O un brazo? No. ¿O borrar la punzada de una herida? No. ¿El honor no es
hábil cirujano entonces? No. ¿Qué es el honor? Una palabra. ¿Qué hay en esa palabra, honor?
¿Qué es ese honor? Aire. ¡Fina recompensa! ¿Quién lo posee? Aquel que murió antier. ¿Acaso
lo siente? No. ¿Lo escucha? No. ¿No puede percibirse entonces? No por los muertos. Pero, ¿no
ha de vivir con los vivos? No. ¿Por qué? A la calumnia no le es dado padecerlo. Por lo tanto, no
me apetece en lo absoluto. El honor es un mero blasón. Y así concluye mi catecismo.
***
SOLILOQUIOS
MACBETH:
vacío de significado.
***
HAMLET
(1599/1601)
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SOLILOQUIOS
JULIO CÉSAR
(1599)
César, no a ensalzarlo. El mal que hacen los hombres les sobrevive; el bien suele quedar
Bruto os ha dicho que César era ambicioso: si lo fue, era la suya una falta grave,
un hombre de honor, como lo son todos, he venido a hablar en el funeral de César. Fue
mi amigo, fiel y justo conmigo; pero Bruto dice que era ambicioso. Bruto es un hombre
tesoro público. ¿Puede verse en esto la ambición de César? Cuando el pobre lloró, César
lo consoló. La ambición suele estar hecha de una aleación más dura. Pero Bruto dice
Todos visteis que, en las Lupercales, le ofrecí tres veces una corona real, y tres
veces la rechazó. ¿Eso era ambición? Pero Bruto dice que era ambicioso y es indudable
No hablo para desmentir lo que Bruto dijo, sino que estoy aquí para decir lo que
sé. Todos le amasteis alguna vez, y no sin razón. ¿Qué razón, entonces, os impide ahora
hacerle el duelo? ¡Ay, raciocinio te has refugiado entre las bestias, y los hombres han
perdido la razón!... Perdonadme. Mi corazón está ahí, en esos despojos fúnebres, con
SOLILOQUIOS
Ser o no ser, he aquí la cuestión. ¿Que es más elevado para el espíritu, sufrir los golpes y dardos de
la insultante fortuna o tomar armas contra el piélago de calamidades y, haciéndoles frente, acabar
con ellas? Morir..., dormir; no más ¡Y pensar que con un sueño damos fin al pesar del corazón y al
los mil naturales
conflictos que constituyen la herencia de la carne! ¡He aquí un término devotamente apetecible!
¡Morir... dormir, tal vez soñar! ¡Si, ahí está el obstáculo! Pues es forzoso que nos detenga el
considerar qué sueños pueden sobrevivir en ese sueño de la muerte, cuando nos hayamos liberado
del torbellino de la vida.
¡Esta es la reflexión que da tan larga vida al infortunio! Pues ¿Quién soportaría: los ultrajes y
desdenes del mundo, los agravios del opresor, las afrentas del soberbio, los tormentos del amor
desairado, la tardanza de la ley, las insolencias del poder y los desdenes que el paciente mérito
recibe del hombre indigno, Cuando uno mismo podría procurar su reposo con un simple estilete?
¿Quién querría llevar tales cargas, Gemir y sudar bajo el peso de una vida afanosa, Sino fuera por:
Temor a algo tras la muerte, la ignorada región de cuyos confines ningún viajero retorna,
Temor que desconcierta nuestra voluntad y nos hace soportar los males que nos afligen antes de
lanzarnos a otros que desconocemos? Así la conciencia nos vuelve cobardes a todos y así el
primitivo matiz de la resolución desmaya con el pálido tinte del pensamiento, y las empresas de
gran aliento o importancia, por esa consideración, tuercen su curso y pierden el nombre de acción.
Pero... ¡la hermosa Ofelia! Graciosa niña, espero que mis defectos no serán olvidados en tus
oraciones.
Ejemplo de soliloquio:
Este camión va muy lento si no se apresura seguramente llegaré tarde a clase y el profesor no
me va a dejar entrar. Lo malo es que no es la primera falta y si sigo así voy a reprobar por
inasistencias, que ni siquiera son mi culpa.
SOLILOQUIOS
Me levanté muy temprano y salí con buen tiempo, pero ahora este chofer quiere ir esperando
a todos a los que se les hace tarde para llevarlos y no tiene atención por los que sí nos
levantamos temprano.
Ahora tengo que pensar qué excusa le doy a profesor para que me deje entrar, yo creo que
ando llegando como a las 8:15, si el chofer no se atrasa más, así que no será muy tarde pero ya
el pretexto del camión no puedo decirlo, ya que lo usé la semana pasada que sí me levanté
tarde.
Tiene que ser un pretexto convincente. ¿Qué estoy enfermo del estómago? No, no me la va a
creer tampoco. ¿Que mi papá me entretuvo con unas cosas que quería que le ayudara? Podría
ser, eso o algo por el estilo. Bueno, parece que ya va más rápido el camión y sí voy a llegar a
tiempo.