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Honestidad

La honestidad es un comportamiento que se ajusta a


los valores de verdad y justicia. Puede entenderse también como el respeto a
la verdad y al derecho de los demás. Ser honesto es ser sincero, franco, no
tener segundas intenciones en el trato con las otras personas; no sacar ventaja
de las posibles debilidades o situaciones de inferioridad de otros individuos. Por
ejemplo: reconocer si nos hemos equivocado o devolver los objetos
encontrados.

La cualidad de la honestidad se nutre de las enseñanzas de nuestros mayores,


las que recibimos en el hogar desde pequeños, pero también del ejemplo
cotidiano: por eso es fundamental que la sociedad en conjunto asuma la
importancia de la honestidad como valor. Por ejemplo: en mi lugar de trabajo
no tomar algo que no es mío. Si encuentra algo preguntar de quien es o
agarrar herramientas de trabajo de otro compañero sin su permiso es se
convierte en un rob o si usted no lo devuelven.

Ser honesto implica obrar con rectitud, no mentir, no tomar lo que no nos
pertenece, no asumir compromisos que no vamos a ser capaces de cumplir, no
generar en los otros expectativas vanas, actuar de la manera en que nos
gustaría que los demás fuera con uno.

Proceder con honestidad es una decisión personal y se incorpora a la forma de


vida de cada uno; es un código no escrito pero permanente, que siempre está
presente en nuestro proceder.

El valor de la honestidad es indispensable para que exista confianza y armonía


entre los seres humanos, e incluye un modo de vivir coherente entre lo que se
piensa o se dice y lo que finalmente se hace.

La honestidad es un valor moral fundamental para entablar relaciones


interpersonales basadas en la confianza, la sinceridad y el respeto mutuo.

La honestidad verdadera permea todos los aspectos de la vida de una persona:


se manifiesta socialmente, pero también en el entorno íntimo del individuo. Esto
quiere decir que la honestidad es tanto exterior como interior, es vista
desde lo cual debe ser un comportamiento coherente, donde las acciones del
individuo sean consecuentes con lo que piensa, dice y predica.
En persona honesta, incluso los actos más pequeños como ser: Informarle al
vendedor que se ha equivocado a nuestro favor con el cambio, devolverle al
anciano el billete que se le acaba de caer sin notarlo, guardar discreción ante
algo que nos han contado o hemos escuchado, ser prudentes en el manejo de
nuestros recursos tanto económicos como personales, asumir la
responsabilidad de nuestros errores, rectificar y corregir cuando sea necesario,
ser leales y transparentes en nuestras relaciones con los demás.

Características de una persona honesta

 Las personas honestas son transparentes

Una de las principales características de las personas honestas es que


mantienen una coherencia entre lo que dicen, lo que piensan y lo que hacen.
En otras palabras, siempre mantendrán una misma conducta. Por eso, se
convierten en personas muy transparentes y sin nada que ocultar.

 Las personas honestas son sinceras

Quienes son honestos/as no saben mentir. Por eso, siempre van a decir la
verdad. Por pequeña que sea la interacción, cuando alguien necesite su
opinión, dirán lo que sienten en verdad.

Por otra parte, a las personas honestas no les gusta meterse en problemas y
mucho menos en aquellos que no los llevan a ningún lado. Eso no significa que
sean débiles. Al contrario, es una manera de mantener sana nuestra paz
mental emocional y nuestra autoestima porque reconocen muy bien su valor
y su moral.

 Las personas honestas no exageran

Cuando eres honesto, no te gusta exagerar la verdad, ni crear escenarios


falsos para que los demás crean en lo que dicen. Es decir, las personas
honestas solo se limitan a mostrar argumentos válidos y con bases para
sustentar sus afirmaciones. Además, son sinceros con sus propios
sentimientos y no van a mentir tan solo para ganar afecto o simpatía ante otras
personas.

 Las personas honestas son leales

Si te preguntas que es ser una persona honesta y responsable, una de las


principales cualidades de estos individuos es su gran lealtad hacia sus seres
queridos. Por eso, defenderán sin reparos a sus amigos y familiares ante
cualquier eventualidad.

En otras palabras, quienes son sinceros y honestos harán lo mejor por el


bienestar de quienes están a su alrededor. Además, actúan sin malicia,
sin hipocresía y sin esperar nada a cambio.

 Las personas honestas no juzgan

Una característica muy resaltante de las personas honestas es que son de


mente abierta y no están atadas a estereotipos de ninguna índole. Sus juicios
de valor son muy equilibrados y razonables, por lo que no se dejan llevar
por los prejuicios.

Igualmente, tienen un fuerte sentido del bien. Por eso, entienden bien el mundo
que les rodea para discernir claramente entre lo que les conviene y lo que no.

 Las personas honestas no fingen

Otra de las características de persona honesta es que demostrará su


personalidad pase lo que pase. De hecho, no engaña ni miente para
conseguir mejores relaciones o posiciones en la vida.

Esta característica las convierte en personas confiables y quienes están a su


alrededor ya conocen su manera de ser. También, suelen decir la verdad con
un toque de sensibilidad para no herir ni dañar con sus ideas o pensamientos.
Es decir, siempre manejan un diálogo abierto y basado en el respeto.

 Las personas honestas son relajadas

Una de las cosas que más resalta en las personas honestas es que son de
carácter relajado y de una mentalidad muy tranquila para enfrentar las
adversidades. Esto se debe a que utilizan la verdad como una estrategia de
equilibrio que les ayuda a estar bien consigo mismos.

En otras palabras, las personas honestas tienen mucha paz mental, puesto que
no basan sus acciones en la mentira. Esto se revierte en un equilibrio saludable
y en un mejor autocontrol.
5 hábitos que practican las personas honestas

1. Las personas honestas no temen decir la verdad: La honestidad significa


tener el coraje de defender siempre la verdad en cada uno de los
contextos.
2. Son conscientes de sus limitaciones.
3. Son personas transparentes: La honestidad es sinónimo de
transparencia, porque cada pensamiento, palabra y acto está en
armonía con la propia personalidad. Ser honestos es mantener siempre
una misma conducta.
4. Luchan por aquello en lo que creen.
5. Las personas honestas inspiran: La persona que vive su día a día desde
la congruencia suele inspirar a quienes saben apreciarla de verdad.

10 formas de enseñar a los niños a ser honestos.

1. Recompensa la verdad

2. Enseña a hablar con la verdad

3. Promueve que diga la verdad, aunque sea dura

4. Modela la verdad

5. No lo pongas a prueba

6. Sé consecuente

7. Endereza sus intenciones

8. Cumple tus promesas

9. Procura que cuide las cosas de otras personas

10. Motívalo a buscar amigos honestos

“Nunca tengas miedo de alzar la voz por la honestidad, la verdad y la


compasión contra la injusticia, la mentira y la codicia. Si gente de todo el
mundo hiciera esto, cambiaría la tierra.”

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