Está en la página 1de 3

COLEGIO SANTA MARIA DE LOS ANGELES .

Hist y Ciencias Sociales 2022

Nombre:………………………………………………………Primero Medio / FECHA: …………..……….

GUÍA DE MATERIA
REVOLUCIÓN FRANCESA
Revolucion francesa
- 1789 a 1799 Revolución francesa
- 1799 a 1815 Imperio Napoleónico

1.- La Ilustración
Recuerda que la Ilustración fue un movimiento intelectual europeo del siglo XVIII que se caracterizó
por plantear los siguientes postulados:
- La división de poderes dentro del Estado: El mejor gobierno se obtiene de la autonomía e igualdad de los
tres poderes del Estado: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Ésta era una abierta crítica al absolutismo
monárquico.
- El mejor gobierno se obtiene de un régimen regulado por una Constitución.
- La defensa de los derechos individuales, las libertades políticas (libertad de opinión, de expresión, de
credo) y de la igualdad civil (igualdad ante la ley, nadie está por encima de la ley).
- La soberanía popular: El poder reside en el pueblo, quien lo delega en sus gobernantes.
- El ideal de gobierno es la república. Montesquieu planteó también como ideal a la Monarquía
Parlamentaria.
Una de las primeras aplicaciones de los postulados de la Ilustración fue el desarrollo del Despotismo
Ilustrado. Éste fue un régimen que, si bien seguía siendo monarquía absoluta, se orientó al desarrollo de
reformas sociales y económicas destinadas al beneficio del pueblo. Este tipo de gobiernos son conocidos
como “populistas”, ya que si bien las reformas se realizan en beneficio del pueblo, el régimen no
consideraba la participación política de los sectores populares en el gobierno.
Principales autores ilustrados:

Jean Rousseau Voltaire Montesquieu

3.-La era de las revoluciones


En 1789 se inició un período de violentas transformaciones políticas radicales que afectaron a casi toda
la sociedad europea por casi un siglo. Este período de luchas políticas puede ser caracterizado por el
enfrentamiento entre las fuerzas liberales, partidarias de la República constitucional, y las fuerzas
absolutistas, partidarias de una monarquía centralizada.
Paralelamente a este proceso de enfrentamiento político, se estaba desarrollando otro, caracterizado por
la conformación y consolidación de los Estados Nacionales, proceso que se había iniciado a comienzos de la
Época Moderna y que culminaría durante el siglo XIX.
De este modo, los procesos revolucionarios que estudiaremos en este módulo son los siguientes:
- Las revoluciones liberales, entre las que cabe considerar a las revoluciones francesas de 1789, 1830 y
1848. Estas tres revoluciones políticas perseguían acabar con el absolutismo monárquico y dar paso a una
república constitucional.
- Las unificaciones nacionales, dentro de las cuales hay que considerar las de Italia (1859-1870) y la de
Alemania (1861-1871). Pese a que se insertan en esta misma perspectiva revolucionaria, en esta oportunidad
no consideraremos el proceso de independencia desarrollado en Estados Unidos, Brasil e Hispanoamérica ni
la Independencia de Grecia (respecto de Turquía).
LAS REVOLUCIONES LIBERALES

La Revolución Francesa de 1789: Antecedentes.


Éste fue el acontecimiento político que dio comienzo a la Época Contemporánea. Se caracterizó por ser
un proceso de transformación radical, de profundo significado, en el que se intentó poner fin a la monarquía
absoluta y transformar a la sociedad francesa en virtud de los postulados de la Ilustración.
Al estudiar la Revolución Francesa, debes considerar los antecedentes. Entre estos antecedentes, es
importante considerar los siguientes:
- La división estamental, jerárquica y abiertamente desigual de la sociedad francesa prerrevolucionaria.
- La gran desigualdad en la distribución de las tierras:entre la nobleza y el clero hacían poco más del 2% de
la población y poseían casi el 70% de las tierras.
- La crisis económica generalizada, provocada por el encarecimiento de productos básicos fundamentales
para la alimentación de la población, tales como el trigo.
- La crisis financiera del Estado francés, debido a las numerosas guerras emprendidas por la monarquía
durante el siglo XVIII.
- La crisis política ocurrida desde comienzos de la década de 1780, provocada por la negativa de la nobleza a
permitir la universalización de los impuestos para financiar la crisis financiera del Estado.

La Revolución Francesa (1789 – 1799)


La Revolución Francesa fue un proceso político que se fue radicalizando progresivamente.
La primera etapa de la Revolución, conocida como los Estados Generales (marzo-julio de 1789), fue
ocasionada por una rebelión de la aristocracia, la que provocó que el rey convocará a esa asamblea con el fin
de aprobar su propuesta de reforma financiera del Estado. Sin embargo, en el seno de los Estados Generales,
el Tercer Estado se rebeló y se constituyó en Asamblea Nacional Constituyente. En este contexto político se
llevó a cabo la Toma de la Bastilla (14 de julio), acontecimiento que marcó la radicalización de la
Revolución y que se conmemora hasta nuestros días.
Los estados generales 1789

La segunda etapa de la Revolución, conocida como


Asamblea Nacional Constituyente (1789-1791), estuvo
dirigido por los representantes del Tercer Estado, que
coincidieron en establecer una Constitución en la que se
restringían los derechos y atributos del monarca, y se
establecía un órgano legislativo. Éste fue el período de
mayores transformaciones legales en toda la Revolución
Francesa.
La tercera etapa, conocida como Asamblea legislativa (1791-1792), se caracterizó por las primeras
invasiones de ejércitos de otros países a Francia, ya que veían como una amenaza a sus regímenes lo que
estaba ocurriendo en Francia.
La cuarta etapa, conocida como Convención (1792-1795), es la etapa caracterizada por la huida y
captura del rey, el que fue enjuiciado por traición a la revolución y fue condenado y ejecutado en la
guillotina. Este acontecimiento, ocurrido en el período Girondino (sector de centro político), terminó por
radicalizar completamente a la revolución, y provocó que nuevos países se sumaran a la invasión de Francia
para acabar con la Revolución.
En este contexto, entre 1793 y 1794 se desarrolló una etapa
conocida como el “Terror”, liderada por Robespierre y Saint Just.
Este período fue de gran violencia revolucionaria: muchos
aristócratas fueron enjuiciados y ejecutados por traición a la
república, entre los que se contaron ilustres revolucionarios, tales
como Danton.
El Terror culminó cuando el propio Robespierre fue condenado y
ejecutado, y se inició un período más moderado. Este período, conocido como Directorio (1795-1799), fue
el proceso final de la Revolución, caracterizado por la represión a los sectores más radicales, a la vez que se
producían victorias militares que expulsaban a las tropas invasores. En esta labor militar destacó la figura
de Napoleón Bonaparte
El Imperio Napoleónico (1799 – 1815)
El 18 Brumario de 1799 (según el calendario de la Revolución Francesa), Napoleón Bonaparte, a esas
alturas un general que gozaba de gran popularidad, llevó a cabo un golpe de Estado, derribando al Directorio
y creando el Consulado, un régimen sustentado en un poder ejecutivo integrado por tres cónsules: él, Sieyés
y Ducos.
Con el tiempo, Napoleón logró imponerse a los demás cónsules y en 1804 se hizo proclamar
Emperador de Francia. Éste era, todavía en 1804, un emperador que necesitaba un Imperio. Entre 1804 y
1812, Napoleón lideró al ejército francés en sucesivas campañas que lo llevaron a conquistar gran parte de
Europa, salvo Inglaterra y Rusia.
En el gobierno interno, el régimen napoleónico se caracterizó por desarrollar reformas políticas, sociales
y económicas que, por una parte, consolidaron los principios de la Revolución Francesa y, por otra,
significaron un retroceso al Antiguo Régimen prerrevolucionario.
El régimen napoleónico consolidó la Revolución Francesa, con la dictación del Código Civil (1804), el
primero de los códigos civiles contemporáneos y modelo de numerosas codificaciones que se desarrollaron
desde entonces en Occidente. Asimismo, Napoleón fundó numerosos liceos para la educación de la
población y fundó el banco Nacional de Francia.
Pero el gobierno de Napoleón también significó un retroceso en relación a la Revolución Francesa, ya
que restauró los privilegios de la nobleza.

El Imperio Napoleónico llegó a su fin tras un intento fallido de


invasión a Rusia (en la que perdió la mitad de su ejército) y en la
batalla de Leipzig (1814), donde el ejército francés fue derrotado
ante una coalición de numerosas naciones europeas. Tras un breve
exilio, Napoleón volvió a gobernar Francia; pero una nueva
coalición, al mando de Wellington, lo derrotó en Waterloo (1815).

Las revoluciones de 1830 y de 1848: Antecedentes


La derrota de Napoleón significó un grave retroceso para las luchas revolucionarias, ya que tras el
Imperio Napoleónico se impuso un régimen conocido como Restauración Absolutista (1815-1830), que tuvo
vigencia en toda Europa continental.
El Congreso de Viena (1815) de donde surgió la Restauración Absolutista.
Durante estos quince años, los monarcas europeos convinieron en organizarse y apoyarse sobre la base
de tres principios:
- El principio de legitimidad, que restauraba el poder a los llamados monarcas legítimos, destronados
durante la era napoleónica.
- El principio de compensación, según el cual los países recuperaban los territorios que habían perdido
durante la era napoleónica.
- El principio del equilibrio del poder, que buscaba impedir que una nación llegara a ser tan poderosa que
amenazara la soberanía de las demás.
De este modo, los monarcas se coordinaron militarmente para impedir cualquier rebrote revolucionario.
Así fue sofocada la revolución liberal de España (1820), pero la alianza se resquebrajó debido al apoyo de
Rusia a la Independencia de Grecia, frente a una posición más moderada de Inglaterra

Trabajo Cof Uno


Elabora siete preguntas de alternativa sobre la materia Arte Barroco y Revolución Francesa, estas
preguntas se evaluarán de la siguiente manera (cada una)
- Originalidad 04 pts
- Redacción clara 03 pts
- Nivel de análisis 04 pts
- Opciones de respuesta 02 pts

También podría gustarte