Está en la página 1de 3

Seguridad en uno mismo: hoja de trabajo

¿Crees en ti mismo?

Ganar seguridad en uno mismo implica practicar. No es nada que ocurra de un día para otro. Los
siguientes ejercicios están pensados para hacerlos con regularidad. Tómate tu tiempo para ponerlos
en práctica. Prueba a escribir un breve guion de seguridad en ti mismo cada semana (tarea 4) o
recuérdate a ti mismo en qué eres bueno (tarea 1).

¿Preparado para empezar? Busca tu diario u otro cuaderno para escribir y anota una tarea distinta
en la parte superior de cada página. Luego escribe tus respuestas debajo. Hay un motivo de escribir
las respuestas a mano: el hecho de escribir cosas a mano ayuda al cerebro a recordar y a procesar
la información de una forma que no lo permite la tarea de escribir en el teclado de una
computadora. No hace falta que llenes toda la página, pero el hecho de reservar una página entera
para cada tarea impedirá que te quedes sin espacio si tuvieras muchas ideas.

1. Practica aquello que ya dominas


Anota tres talentos, habilidades o rasgos positivos que presentas y con los que disfrutas.
Ejemplos de talentos o habilidades: bailar, hacer deporte, tocar música, aprender idiomas, artes
plásticas, escribir, ser un activista del medio ambiente, organizar cosas, decorar, tocar la batería,
programar, cocinar, hacer pasteles, ser un activista de los servicios comunitarios, diseñar moda,
hacer costura, tejer, cuidar niños, leer, actuar en el teatro, escribir poesía, nadar etc.
Ejemplos de rasgos positivos: amable, divertido, cariñoso, atento, creativo, etc.

Ahora, piensa en si dedicas tiempo regularmente a cada uno de ellos.


Ahora escoge un talento o habilidad. Escribe ideas sobre cómo podrías encontrar tiempo para poner
en práctica este talento a habilidad una vez a la semana o más. Sé específico. Anota dónde recibirás
la clase, a qué equipo o comité te unirás, dónde y cuándo practicarás o participarás en la actividad,
o cualquier otra forma en que te reservarás parte de tu tiempo para esa actividad en tu vida
cotidiana.
Por ejemplo: soy un buen jinete y me llevo muy bien con los caballos.
Para conseguir que este talento forme parte de mi vida, echaré una mano en el establo los sábados
antes de montar a caballo. Me ofreceré a cuidar del caballo que monto y me aseguraré de montarlo
una vez a la semana.

2. Elabora un listado de lo puedo hacer


Haz una lista larga de cosas que puedes hacer, incluso de cosas pequeñas. ¿Contiene cosas que la
gente no sabe sobre ti?
Por ejemplo: puedo reparar una rueda pinchada, hacer RCP (reanimación cardiopulmonar), montar
en bicicleta, afinar una guitarra, ordeñar una vaca, correr cinco kilómetros, cuidar un caballo, hacer
pan, cocinar determinado plato, tocar el violín, hacer caricaturas, coser un vestido, tejer una
bufanda, nadar, cuidar niños, conducir un coche...

3. Ahora plantéate un desafío de seguridad


Ahora ha llegado el momento de dar un paso adelante y plantearte un reto.
Escribe la siguiente frase y acábala de por lo menos cinco formas diferentes: "Si tuviera más seguridad
en mí mismo, yo..."
Por ejemplo: si tuviera más seguridad en mí mismo, competiría en un rodeo, haría un monólogo,
aprendería a conducir, montaría una banda de música, intentaría inscribirme en un equipo de
natación, diseñaría mi propia página web, sería socorrista, cuidaría niños, estudiaría en el
extranjero, montaría un blog de moda, solicitaría plaza en el MIT (Instituto Tecnológico de
Massachusetts).
Piensa en qué es lo que te frena a hacer cada una de esas cosas. Escoge la más fácil o la más difícil.
Piensa en cómo podrías hacer crecer tu seguridad en ti mismo para intentarlo.
¿Qué necesitarías hacer?
¿Quién te podría ayudar con sus ánimos y su apoyo?
Imagínate que ya lo has conseguido.
Escribe como si ya hubieras ganado la seguridad que necesitabas y ya hubieras hecho lo que
deseabas.
Por ejemplo: si tuviera más seguridad en mí mismo, competiría en un rodeo. Monto muy bien a
caballo pero, si mejorara mis facultades para echar el lazo, estaría más seguro de mí mismo.
Afortunadamente, puedo aprender de Jason, que trabaja en el establo, y observar vídeos
atentamente. Ahora... imaginándome que ya lo he conseguido... creo que estoy más seguro de mi
mismo gracias a que he practicado y a que no he tirado la toalla por la frustración cuando nada
parecía salirme bien.

4. Escribe un guión de seguridad motivacional


Escribe lo que te dirías para convencerte a ti mismo de que ya tienes lo que necesitas en cada una de
las cinco cosas que escribiste en la lista de la tarea 3.
Por ejemplo: mi actuación en una noche de micrófono abierto al público arrasará. Todo el mundo
dice que tengo talento para entresacar los momentos más excéntricos de la vida. Me he dado cuenta
de que la gente se ríe al escuchar mis historias —y MUCHO. Me encanta oírles reír, y el hecho de oír
sus risas me engancha y me hace pensar en cosas incluso más divertidas. Es cierto, siendo realista
en este punto…, me asusta un poco subirme a un escenario. Por eso, solo me fijaré en mis amigos y
me imaginaré que estamos en la sobremesa. He practicado y me he preparado bien mi actuación.
¡Estoy listo! ¡Me saldrá redondo y eso me hará sentirme feliz!

También podría gustarte