Está en la página 1de 4

Instituto Técnico María Auxiliadora

Ensayo historia de la farmacia en Colombia

Profesor(A):

Harly Briyid Plazas Mosquera

Alumno(A):

Ángel Eduardo Huelgos Urriago

Garzón – Huila

Agosto 2022
ENSAYO “LA FARMACIA EN COLOMBIA”

El ser humano a través de su historia ha desarrollado conocimientos y habilidades


que le han ayudado a mejor sus condiciones de vida en todo sus ámbitos
culturales, económicos y sociales. Nuestra raza, por la condición frágil con la que
fuimos creados, nos hemos visto asechados por las condiciones naturales que
han amenazado y seguirán amenazando nuestra existencia, por ello gracias a
nuestro capacidad de raciocinio y conocimientos científicos adquiridos a lo largo
de la historia, hemos podido mitigar en gran parte esos riesgo, es ahí donde nace
una ciencia de la salud como la farmacología, que nos permite el estudio, origen y
la propiedades químicas de los medicamentos para el uso correcto y efectivo en el
tratamiento de enfermedades.

En nuestra patria Colombia, la historia de la farmacia se remonta a la época


colonial con preparaciones de tipo artesanal. A principios del siglo XIX (1826)
correspondió a la Academia de Medicina hacer el examen, según lo definía la Ley
1ª, título XIII, Libro 8 de la Novísima Recopilación. Esta exigía como requisitos:
saber latín, 4 años de práctica con boticarios examinados y aprobados. Tener más
de 25 años de edad. Para la época se aceptan las farmacopeas de los Estados
Unidos USP, la francesa (Codex), inglesa y alemana. Hacia la primera mitad de
siglo XIX (1842) el examen y la expedición del diploma pasaron a ser
responsabilidad de la Facultad de Medicina. Se requería el haber realizado
estudios de Farmacia y practicado durante 3 años con boticarios aprobados. A
principios del siglo XX las Facultades de Medicina fueron autorizadas para la
expedición de títulos

Las normas jurídicas que se dictaron por aquella época, tales como la Ley 12
de1905, Ley 83 de 1914 y Ley 15 de 1925, sólo entraron a legalizar la situación
encontrada, es decir a expedir títulos de idoneidad a quiénes venían ejerciéndola
Farmacia. La aparición de una verdadera profesión de la farmacia tuvo lugar en
1929 con el comienzo de la primera Escuela de Farmacia de la Universidad
Nacional, dependiendo de la Facultad de Medicina. En la década de 1930 la
farmacia magistral o galénica sufrió un proceso de cambio radical hacia la
fabricación masiva de sustancias medicamentosas. Se abandona la práctica
magistral y se da paso al medicamento obtenido en forma masiva, sometido a la
fase de industrialización. Consecuentemente con aquel avance se incrementan los
riesgos en cuanto a su estabilidad, concentración de los principios activos y su
período de vida útil.

En 1938 se aumentó a 4 años el estudio en la Escuela de Farmacia de la


Universidad Nacional, como consecuencia de las exigencias del proceso de
industrialización. Debido a este fenómeno se produce un incremento en la
demanda de profesionales farmacéuticos y esto induce a la creación de las
Facultades de Química y Farmacia de la Universidad de Cartagena en 1941, de la
Universidad del Atlántico en 1942 y la Química Farmacéutica de la Universidad de
Antioquia en 1943.

En la década de 1950 se señala el avance del proceso de industrialización


orientado hacia la solución de los problemas de salud de la población. Se
intensificó la comercialización de productos farmacéuticos. Por Decreto 946de
1953 se creó el Consejo Nacional de Práctica Profesional con las mismas
funciones de la Junta Central de Títulos, pero con una característica, la
disminución de la influencia de los profesionales en la concesión de licencias. Esto
produjo un nuevo incremento de empíricos. Los médicos también fueron
autorizados para el ejercicio de la farmacia.
Con la aprobación de la Ley 23 de 1962 se dio paso a la delimitación del ejercicio
de la farmacia y se hizo diferenciación entre los nuevos establecimientos
farmacéuticos. Aunque no define lo que debe ser el ejercicio de la farmacia sí
identifica las funciones que debe desempeñar el farmacéutico

Los avances en el consumo indiscriminado de medicamentos indujeron al


gobierno a la creación de mecanismos para producir medicamentos genéricos que
llegaran a la población menos favorecida, dando estímulos a los fabricantes
nacionales y extranjeros. Más adelante desarrolló un proyecto de fabricación de
genéricos través de un Instituto descentralizado.

Por Ley 47 de 1967 se faculta al gobierno para crear la carrera intermedia de


Regencia de Farmacia y correspondió a la Universidad de Antioquia el desarrollo e
implementación de éste. En la década de 1970 se realizó un análisis de la
problemática farmacéutica en el país con el fin de corregir los problemas que en
materia de registro, distribución y control de calidad presentaban los
medicamentos, además de la gran cantidad de sustancias psicoactivas dieron
lugar a la aprobación del primer Estatuto Nacional de estupefacientes mediante el
Decreto-Ley 1188 de 1974.

A mediados del siglo XX con la ayuda y expansión de las empresas con la


globalización, muchos laboratorios farmacéuticos hacen alianzas y se expanden
para crecer intelectualmente como financieramente. En esta época se da origen a
la creación del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos
(INVIMA) creado por la Ley 100 del 23 de diciembre de 1993, el cual comenzó a
ejercer sus funciones a partir de febrero de 1995.
También Se inicia el sistema de Atención Farmacéutica y el programa de
medicamentos esenciales dentro del Plan Obligatorio de Salud.

Actualmente en Colombia existen grandes distribuidoras que se pelean el negocio


farmacéutico como lo son Coopidrogas y La rebaja, que son de origen colombiano,
dos extranjeros como lo son Cruz verde de origen mexicano, y Farmatodo de
origen venezolano, las cuales mueven miles de millones al año en todo e territorio
colombiano, con productos de calidad que día a día utilizamos para el cuidado de
nuestra salud. Es ahí donde entramos nosotros como futuros auxiliares de
farmacia los cuales tenemos la obligación ética y moral de brindar una excelente
asesoría al usuario farmacéutico, tratándolo con empatía, de la forma mas
humana posible, para que consigan el medicamento adecuado para el paciente
adecuado, en la dosis correcta y así con nuestro buen desempeño laboral
contribuir al desarrollo social y económico de nuestra región.

También podría gustarte