Está en la página 1de 3

Nuestro lenguaje refleja muy fielmente la manera en que pensamos y actuamos,

deja entrever nuestros paradigmas y nuestras creencias acerca de nosotros


mismos y del mundo.
Revisar la manera en que nos expresamos puede resultarnos una herramienta
más en el proceso hacia la afectividad personal.
A continuación, le proponemos el siguiente ejercicio compuesto de dos partes:
Parte 1 de la obligación a la elección.
A una lista de frases que comiencen con palabras “tengo que” …”. Piensa en
todas aquellas cosas que usted considera “debe” hacer. Tómese el tiempo
necesario para reflexionar.

Tengo que: estudiar para matemáticas


Tengo que: aprender a medir mi tiempo.
Tengo que: hacer ejercicio.
Tengo que: saber usar las comas
Tengo que: levantarme más temprano.

Ahora retomé las frases que escribió y reemplace el “tengo que…” por “Elijo…”.
Reproduce exactamente las mismas modificaciones simplemente el encabezado
(elijo en lugar de tengo que)
Elijo: estudiar para matemáticas.
Elijo: aprender a medir mi tiempo.
Elijo: hacer ejercicio.
Elijo: levantarme más temprano.

¿Cuál es la diferencia qué nota en una y en otra versión de sus declaraciones?

Qué en la primera declaración es como una propuesta y en la otra declaración es


más decidido
Siempre tenemos el poder de tomar una decisión, aún en el caso de que esa
elección sea entre alternativas indeseables. El círculo de preocupación está lleno
de “tengo que…”

Parte 2: de Lo imposible a lo no deseado.


Haga una lista de frases que comiencen con las palabras “no puedo…”15 en todas
aquellas cosas que usted considera que “no puede” hacer. Tómese el tiempo
necesario para reflexionar.
No puedo: comer las patitas de los pollos

No puedo: saber qué va a pasar mañana.

No puedo: regresar el tiempo.

No puedo: saber el significado de la vida.

No puedo: saber qué piensan los demás de mi

Ahora vuelva a las frases que escribió y reemplace el “no puedo…” por “no
quiero…”. Repita exactamente la misma frase modificando solo el encabezado (no
quiero en lugar de no puedo).
No quiero: comer las patitas de los pollos.
No quiero: saber qué va a pasar mañana.
No quiero: regresar el tiempo.
No quiero: saber el significado de la vida.
No quiero: saber qué piensan los demás de mí.
¿Cuál es la diferencia que nota en una y otra versión de sus declaraciones?
La primera declaración es más fácil de decir, la segunda es algo difícil por qué te
pone a pensar en muchas cosas

Es algo realmente imposible, pero es algo posible que usted se niega a hacer.
Reflexiones sobre su capacidad y poder de negación. ¿Qué otra cosa puede
descubrir?
Creo que hay muchas cosas por descubrir de nosotros mismos y muchas cosas
que aprender y el tiempo se encargará de eso.

También podría gustarte