Está en la página 1de 2

Italia (en italiano, Italia, pronunciado /i'talja/ ( escuchar)), oficialmente la

República Italiana (en italiano, Repubblica Italiana pronunciado /re'pub:lika


ita'ljana/), es un país soberano transcontinental, miembro y fundador de la Unión
Europea, constituido en una república parlamentaria compuesta por veinte regiones,
integradas estas, a su vez, por 111 provincias.8

Italia se ubica en el centro del mar Mediterráneo, en Europa meridional. Ocupa la


península itálica, así como la llanura Padana, las islas de Sicilia y Cerdeña y
alrededor de ochocientas islas menores, entre las que se destacan las islas Tremiti
en el mar Adriático, los archipiélagos Campano y Toscano en el mar Tirreno, o las
islas Pelagias en África septentrional, entre otras. En el norte, está rodeada por
los Alpes y tiene frontera con Francia, Suiza, Austria y Eslovenia. Los micro-
Estados de San Marino y Ciudad del Vaticano son enclaves dentro del territorio
italiano. A su vez, Campione d'Italia, es un municipio que forma un pequeño exclave
italiano en territorio suizo.9

Debido a su localización central en el Mar Mediterráneo, Italia recibió, durante la


Antigüedad,1011 diversas influencias de civilizaciones mediterráneas exteriores,
como la de los fenicios y cartagineses en sus islas mayores1213 y de los antiguos
griegos en la llamada Magna Grecia,1415 así como también fue el hogar de muchas
culturas propias distintas, como la civilización nurágica, los etruscos y los
latinos, siendo estos últimos quienes dieron vida a la civilización romana,1617 y
asistió al nacimiento de la República y del posterior Imperio romano.1819 Tras la
caída del Imperio romano de Occidente, bizantinos, lombardos y musulmanes se
disputaron el control sobre el territorio itálico,2021 quebrando así su anterior
unidad política.2223 A partir de la Plena Edad Media, Italia fue la cuna de
repúblicas marítimas como Venecia, Génova, Pisa y Amalfi, de los Estados
Pontificios y también del humanismo, del Renacimiento y del movimiento barroco,
entre otros Estados y movimientos culturales.2425 En el curso del siglo xix,
mediante el proceso histórico conocido como Risorgimento, los varios territorios
italianos lograron unificarse bajo un mismo Estado: el Reino de Italia.2627
El nombre de Italia ha sido usado desde antiguo, al menos desde el siglo viii a.
C., inicialmente para designar a las regiones del sur, y posteriormente también a
las del centro, de la que se conoce como península itálica, haciendo referencia a
los pueblos itálicos, hablantes de las lenguas llamadas igualmente.43

Según el historiador griego Antíoco de Siracusa, el vocablo Italia designaba, antes


del siglo v a. C.,44 a la parte meridional de la actual región italiana de Calabria
—el antiguo Brucio—, habitada por los itàlii, el grupo más meridional de los
itálicos (actualmente esta zona comprende las provincias calabresas de Reggio, Vibo
Valentia y partes de la provincia de Catanzaro).45 Es posible que los itálicos
tomaran su nombre de un animal-tótem, el ternero, que, en una lejana primavera
sagrada, los había guiado hasta los lugares en los que se asentaron
definitivamente. También según el arqueólogo Pallottino el nombre de Italia
derivaría del gentilicio de uno de los pueblos itálicos nativos de la región de
Calabria, los (v)itàlii, el cual mutua su nombre de su animal sagrado: el ternero
(viteliú en idioma osco, vitulus en latín y vitello en italiano); y que fue usado
por los antiguos griegos como término general para designar a los habitantes de
toda la península.46

En el siglo ii a. C., el historiógrafo griego Polibio llamaba Italia al territorio


comprendido entre el estrecho de Mesina y los Apeninos septentrionales, aunque su
contemporáneo Catón el Viejo extendió el concepto territorial de Italia hasta el
arco alpino. El término se consolidó de manera definitiva sobre todo desde que, la
ciudad itálica de Roma, a partir del siglo v a. C., unificó gradualmente toda la
península conquistando y federando al resto de pueblos itálicos peninsulares,
empezando por los latinos, de los cuales la misma constituía una aldea, y
terminando con los etruscos hacia el norte y los brucios hacia el sur, unificando
así todo el territorio peninsular bajo un único régimen y dándole nombre de Italia,
la cual, desde entonces, constituirá el territorio metropolitano de la misma
Roma.1823

El nombre de Italia fue usado también en monedas acuñadas durante la guerra Social
por la coalición de los socii (aliados) itálicos, en lucha contra Roma y las demás
ciudades itálicas ya provistas de ciudadanía romana, para obtener, a su vez, la
plena ciudadanía romana,47 la cual fue otorgada tras la guerra Social a todos los
habitantes libres de Italia a través de la Lex Plautia Papiria.48Posteriormente, el
norte de Italia (ex Galia Cisalpina), fue añadido oficialmente al territorio de la
Italia romana en el curso del siglo i a. C., llevando así, de iure , el nombre de
Italia hasta los pies de los Alpes;49 mientras, las islas de Sicilia, Cerdeña y
Córcega, no pasarán a formar parte de Italia hasta el siglo iii d. C., como
consecuencia de las reformas administrativas de Diocleciano, aunque sus estrechos
lazos culturales con la península permiten considerarlas como parte integrante.
Entre siglo xviii a. C. y el siglo ii existió en Cerdeña la cultura nurágica.
Durante la Edad del Hierro se sucedieron varias culturas que pueden ser
diferenciadas en cuatro grandes núcleos geográficos principales: los oscos,
asentados a lo largo de toda la cordillera de los Apeninos (y pertenecientes al
macro-grupo de los pueblos itálicos conocido como osco-umbros), los latinos del
Latium Vetus (pueblo itálico del grupo latino-falisco), los italiotas de la Magna
Grecia y el pueblo preindoeuropeo de los etruscos, en Etruria.50 Otra cultura,
diferenciada de las ya mencionadas, la de los ligures, constituía un enigmático
pueblo preindoeuropeo que habitaba en el noroeste de Italia.51

Los etruscos fueron un pueblo de lengua preindoeuropea cuyo núcleo histórico fue la
Toscana, a la cual dieron su nombre (eran llamados Τυρσηνοί (tyrsenoi) o Τυρρηνοί
(tyrrhenoi) por los griegos y tuscii o luego etruscii por los romanos; ellos se
denominaban a sí mismos rasena o rašna). Por mucho tiempo los orígenes de los
etruscos se creían desconocidos, sin embargo, las modernas investigaciones sobre el
origen de los etruscos, llevadas a cabo por un grupo de genetistas y coordinadas
por Guido Barbujani, miembro del departamento de Biología y Evolución de la
Universidad de Ferrara, llegaron a la conclusión de que, genéticamente, el origen
de los etruscos es autóctono de la península itálica, 52y que consistiría en una
evolución de la anterior civilización villanoviana.53

Desde la Toscana se extendieron por el sur, hacia el Lacio y la parte septentrional


de Campania, en donde chocaron con las polis italiotas de la Magna Grecia ( sur de
Italia ); mientras hacia el norte de la península itálica ocuparon la zona
alrededor del valle del río Po, hasta el sur de la actual región de Lombardía.
Llegaron a ser una gran potencia naval en el Mediterráneo Occidental, lo cual les
permitió establecer factorías en Cerdeña y Córcega. Sin embargo, hacia el siglo v
a. C. comenzó a deteriorarse fuertemente su poderío, en gran medida al tener que
afrontar, casi al mismo tiempo, las invasiones de los celtas, desde el norte, y la
competencia de los cartagineses para los comercios marítimos, desde el sur. A
partir del siglo iv a. C., Etruria (nombre del territorio de los etruscos), fue
gradualmente conquistada y absorbida por la República romana y, los etruscos, al
igual de los demás itálicos, federados por los romanos, volviéndose así parte
integrante de la Italia romana.54

También podría gustarte