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LECCIÓN 01 - CICLO V - TAREA 01

LA PERSONA
Después de leer el material adjunto sobre la vida de Fray
Junípero, responde la siguiente pregunta: ¿Según tu opinión, qué
aspecto de la vida de este personaje te parece más importante?
Envía la tarea en PDF.

San Junípero Serra: “Los indios me robaron


el corazón” Julio 1, 2021 por Salvador Aragonés | Aleteia

Junípero
Serra fue el gran misionero de la Alta California, y a su obra se deben la defensa de los indios del
lugar, los “pames”, a quienes consideraba sus “hijos” y a los que enseñó el cultivo de productos
mediterráneos, como la vid, las técnicas de labranza, la carpintería y albañilería, a tejer, a guisar,
a leer y escribir.
La labor de Junípero Serra fue de civilización y evangelización al mismo tiempo. Aprendió con
gran esfuerzo la lengua de los indios nativos y se dedicó a ellos.
Esto desmiente a quienes lo ven como un “conquistador” o “colonizador”, manipulados por
algunos grupos contrarios a la Iglesia católica.

Fraile reconocido

Los restos mortales de Fray Junípero descansan en la misión que él fundó de San Carlos
Borromeo en Monterrey. Es un acto de justicia, pues fray Junípero es más conocido en Estados
Unidos que en España. Fue un fraile ejemplar, viviendo la pobreza evangélica.
La presencia de Junípero Serra en California fue debida a la expulsión de los jesuitas en el
reinado de Carlos III (1767).
Los jesuitas habían evangelizado la Baja California, aunque no se conservan apenas sus
misiones porque estaban mal administradas afirma fray Zephyrin Engelhardt (The Mission and
Missionaries of California).
Tras su expulsión fueron enviados en su lugar los padres franciscanos y dominicos, aunque estos
últimos tuvieron muy poca presencia en California.

De España a México y a Estados Unidos


El fraile mallorquín había aprendido en los años anteriores el trato con los indígenas trabajando
en México. A la Alta California llegó con el militar Gaspar de Portolá, que estaba al frente de un
grupo de tropas para conquistar la Alta California.
Portolá era natural de Balaguer (Lleida). Una vez encontró este que muchos españoles habían
enfermado de escorbuto y fray Junípero sufría fuertes dolores en la pierna.
Le ofreció llevarlo a México por si se podía curar, pero el franciscano dijo que no, y que, si moría
que le enterraran allí mismo, en la cuneta.
Fundador de misiones
De la extraordinaria labor que hizo fray Junípero Serra dan fe las nueve misiones que fundó. En
ellas se ganó la amistad de los indios pames que eran de una raza, al decir de los
colonizadores, de muy escasa inteligencia, torpes en las labores manuales y pobres en el
entendimiento de las cosas.
Los españoles –alguno de ellos conquistadores con pocos escrúpulos—engañaban a los indios y
traficaban con lo mejor de sus productos naturales y vendían los suyos a precios de usura.
Fue Junípero Serra quien de golpe decidió reducir a la mitad los precios de todos los
productos para que estuviesen al alcance de los indios.
Como curiosidad, cuando llegaron los españoles a California encontraron mucha viña salvaje,
cuyas cepas llegaron a España y de ellas se extrajo el vino de misa, según señala fray Agustí
Boadas O.F.M., estudioso de las misiones franciscanas.

Los indios en su corazón


Con el fin de poderse comunicar con los indios aprendió el franciscano su lengua.
Es falso lo que han dicho algunos indios norteamericanos que impuso la lengua española
porque está demostrado que el proceso fue al revés.
De los indios dijo que “ellos me han robado el corazón”, según atestigua Francis F. Guest, OFM,
(“Junípero Serra and his approach to the Indians”). Tuvo que enfrentarse a veces con el poder
político para defender a los indios que decía “son nuestros hijos”.
De entre las misiones que fundó fray Junípero –las misiones eran centros religiosos, culturales y
administrativos– están la de San Carlos de Monterrey, San Francisco origen de la importante
ciudad actual, la de San Gabriel que luego se transformó en la ciudad de Los Ángeles, San Diego
y Sacramento la actual capital de California. Fueron bautizados unos 5700 indios.

Una estatua en el Capitolio


La labor que desarrolló el tenaz fray Junípero Serra –que por cierto no gozó de buena salud lo
que no impidió su gran obra- fue reconocida por los californianos hasta el punto que lo
propusieron y así se acordó poner una estatua del fraile mallorquín en el Capitolio, junto a los
padres de la patria de los Estados Unidos, pues todos los estados tienen la estatua de un héroe
del Estado.
Junípero Serra es el único no americano que tiene una estatua en el National Statutary Hall
del Capitolio.

Familia pobre y comunidad pobre


Fray Junípero Serra era natural de Petra (Mallorca), de padres campesinos y muy pobres, que le
pusieron el nombre de Miquel Josep que cambió por el de Junípero (Junípero Sabina) al profesar
como franciscano.
Sus cualidades intelectuales le valieron para ser pronto profesor de Teología en Palma y a los 36
años se fue como misionero a Las Américas. Zarpó desde Palma en un buque que le llevaría a
Nueva España, es decir a México, al frente de 20 franciscanos de los que 16 eran mallorquines.
Entre ellos estaba su íntimo amigo y biógrafo, fray Francisco Palou (Relación histórica de la vida y
apostólicas tareas del venerable padre fray Junípero Serra, México, 1787). Ambos franciscanos
hablaban en catalán y escribieron también en esa lengua. Falleció fray Junípero en Monterrey en
agosto del año 1784, a los 71 años.

Santo misionero
El fraile mallorquín no fue solo un hombre de gobierno que misionó la Alta California, sino también
un santo. Así lo han reconocido generación tras generación hasta que Juan Pablo II lo beatificó
en el año 1988 en uno de sus viajes a los Estados Unidos y el papa Francisco lo canonizó el 23
de septiembre de 2015 en la ciudad de Washington.
Como ha dicho el Ministro General de los padres franciscanos menores, fray Michael Perry,
norteamericano, la fiesta de fray Junípero Serra, el 1 de julio, se celebra mucho en Estados
Unidos.

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