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Docente:
Oliva Nuñez Juan Manuel
Alumnos:
2022
La etapa del militarismo fue el punto donde se cortaron los lazos con la oligarquía,
permitiendo que en 1968 los militares rigieran un gobierno nacionalista, el cual estaba
caracterizado por su independencia respecto a la política exterior y por la repartición de
la riqueza en el campo económico. Así mismo, este régimen combinó el personalismo
del presidente con el carácter corporativo de un gobierno de las fuerzas armadas, sin
embargo, esta combinación tuvo momentos de crisis, evidentes durante su jefatura. Este
ensayo muestra puntos importantes acerca de este periodo.
Desde 1969 se aplicó la ley de reforma agraria donde los agrarios fueron expropiados,
cada persona que tenga mayor de 50 hectáreas y 150 hectáreas en la costa y sierra
respectivamente, los privaba de sus propiedades. La expropiación era de acuerdo a las
tasas oficiales del pago en impuestos. Con el lema esgrimido del gobierno de Velazco
“la tierra para quien la trabaja”, se entregaron tierras a los trabajadores estables y
permanentes, y no a los trabajadores temporales, debido a que habían existido diferentes
regímenes laborales; y administradas por personas que nombraba el mismo gobierno.
Los yacimientos peruanos más importantes en esos años, también fueron expropiados y
así tenerlos a cargo el estado peruano por empresas públicas, que tenían como finalidad
la ampliación de producción del estado. También, se creó el pacto andino entre 6 países
donde se encuentra Perú, Chile, Colombia, Venezuela, Bolivia y Ecuador con un
programa de industrializar la modernización económica. Otra reforma fue los medios de
comunicación y educación, que lo llevaron a tomar a cargo los empresarios peruanos, ya
que tenía como función transferir a sectores organizados de la sociedad. En esos
tiempos el gobierno oficializó el quechua como lengua en el Perú.
Se llama Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas (1968 – 1980) a los periodos
de gobierno de los generales Velasco Alvarado y Morales Bermúdez. Cuyo inicio fue el
golpe de estado al presidente Fernando Belaunde, quien fue sacado por la fuerza de
Palacio de Gobierno, para implantarse un gobierno de corte nacionalista que los
militares llamaron “Revolución Peruana”. Los militares justificaron este golpe de
estado, pues consideraban que la economía nacional estaba en manos de la oligarquía,
es decir de un pequeño grupo de familias ricas, a quienes no le importaban los intereses
del país, y habían sumido a la mayoría de peruanos a la dependencia y pobreza.
Si bien esta reforma tuvo intenciones reivindicativas con los campesinos, no logró
cumplir sus objetivos. Ello se debió a múltiples factores como la falta de preparación de
los trabajadores y gerentes para administrar estas cooperativas, que a la larga terminaron
quebrando, hundiendo más en la pobreza a sus trabajadores. El estado no estaba
preparado para asumir tamaña responsabilidad, no dio la asistencia técnica necesaria
para que estas cooperativas agrarias funcionen con éxito. Creo que la Reforma Agraria
fue llevada a cabo de forma desorganizada, abandonando a los trabajadores a su suerte
ahora que pasaban a administrar las tierras. Como señalan algunos especialistas, no se
debió expropiar a aquellas haciendas que funcionaban bien, que eran exitosas al generar
altos niveles de producción (azúcar, algodón, etc), sino que se debió repotenciarlas y
crear leyes laborales que protegieran a los trabajadores en general.
BIBLIOGRAFIA:
http://www.ruralfinanceandinvestment
Nación y Sociedad en la Historia del Perú, Peter Klaren. IEP. 2004. Capítulo XI