1.

INTRODUCCIÓN
Dentro de las festividades religiosas que el cristianismo celebra con más celo, está la de “la
Pasión de Cristo”, es decir “la de su muerte y resurrección”. Por medio de esta festividad se
declara que Cristo murió un viernes y resucitó un domingo muy de mañana.
 
Se cree que los acontecimientos ocurrieron de la siguiente manera:
1. Crucificado un viernes a las 9:00 horas.
2. Estando en la cruz fueron hechas tinieblas de las 12:00 a las 15:00 horas.
3. A las 15:00 horas murió.
4. José de Arimatea, regresando del Gólgota, lugar de la crucifixión, solicita en Jerusalén a
Poncio Pilato, le permita bajar de la cruz el cuerpo del Señor para darle sepultura.
5. El Señor Jesús, es sepultado casi al ocultarse el sol de ese día.
 
He aquí dos pasajes, interpretados, aparentemente han dado el apoyo bíblico para creer que
Jesús murió en viernes: "Y como Jesús tomó el vinagre, dijo: consumado es. Y habiendo
inclinado la cabeza, dio el espíritu. Entonces los Judíos, por cuanto era la víspera de la Pascua,
para que los cuerpos no quedasen en la cruz en el sábado, pues era el gran día del sábado,
rogaron a Pilato que se les quebrasen las piernas, y fuesen quitados" (Juan 19.30-31
RV1909). Y en el libro de Lucas se lee: "Y quitado, lo envolvió en una sábana, y le puso en un
sepulcro abierto en una peña, en el cual ninguno había aún sido puesto. Y era día de la víspera
de la Pascua; y estaba para rayar el sábado" (Lucas 23.53-54 RV1909).
 
Como en estos pasajes se expresa que cuando Jesús murió y fue sepultado, estaba para “Rayar
el sábado: "Entonces Jesús murió en viernes, ya que estaba para entrar el sábado".
 
Después de esto, se cree que el Señor Jesús, resucitó el domingo por la madrugada, empleando
para tal afirmación el siguiente texto: “Habiendo, pues, resucitado Jesús por la mañana, el
primer día de la semana, apareció primeramente a María Magdalena, de quien había echado
siete demonios” (Marcos 16.9).
 
La Biblia, siendo el libro que contiene la Palabra de verdad, registra el siguiente dicho de Jesús,
que como todos, hay que tomar muy en cuenta: "No juzguéis según lo que parece, sino juzgad
con justo juicio" (Juan 7.24). Siguiendo el consejo del Hijo de Dios, debemos realizar un
análisis profundo para llegar a la verdad de las cosas.
 
Pero aún hay algo más importante que hay que considerar, y esto es la veracidad del Cristo en
el cuál se está creyendo: "... Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre,
diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán" (Mateo 24.4). Y más adelante él mismo
agregó: "....Si alguno os dijere: He aquí está el Cristo, o allí, no creáis. Porque se levantarán
falsos Cristos y falsos profetas y darán señales grandes y prodigios, de tal manera que
engañarán...." (Mateo 24.23).
 
¿En dónde estriba el poder determinar la veracidad del Cristo en cuál se está creyendo? El
apóstol Pablo nos da la respuesta: “3 Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo
recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; 4 y que fue sepultado,
y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras” (1 Corintios 15.3-4).
 
Ahora pregúntese: ¿El Cristo en el cual he creído, es el mismo que la Palabra de Dios revela? El
poder determinarlo ahora de una manera veraz y contundente, es de gran importancia para su
salvación personal, porque el equivocarse le traería por consecuencia la perdición eterna: "No
todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos..." (Mateo 7.21).
 
Deje que sea la Palabra de Dios la que le ayude a encontrar la tan anhelada fuente de vida
eterna: "El que cree en mí, como dice la Escritura, ríos de agua viva correrán de su vientre"
(Juan 7.38).
 
2. ASPECTOS PREVIOS AL TEMA
 
2.1 LA FORMA DE CONTABILIZAR LOS DÍAS EN LA BIBLIA
Primeramente es necesario tener presente que el Dios Eterno como el Creador del tiempo,
estableció una forma de contabilizar los días desde la creación misma: “Y llamó Dios a la luz Día,
y a las tinieblas llamó Noche. y fue la tarde y la mañana un día” (Génesis 1.5). En este texto
aparece el término hebreo “éreb” que de acuerdo con la concordancia Strong significa
“anochecer, caer la noche” (Strong He #6153). Por lo tanto, una traducción más precisa
para este texto es la que ofrecen las siguientes versiones:
 
Tanaj, Ed. Katz: “Y fue el anochecer y fue la mañana [de] un día”.
 
Traducción Kadosh Israelita Mesiánica: “Así que hubo noche, y hubo mañana, un día”.
 
Sin perder de vista la forma en que Dios estableció que se contabilizara un día, debemos llegar
al entendimiento que la expresión "amanecer de un día" en la Biblia, no significa exclusivamente
"salir el sol", sino también "principio de un día", lo cual ocurre inmediatamente que la luz del sol
se ha ocultado o inician las tinieblas. También es importante establecer que la "víspera de un
día" en la Biblia, se refiere a la tarde o parte final de un día, lo cual ocurre antes de que se
acabe de ocultar la luz del sol o inicien las tinieblas (vea el diagrama inferior).
 

 
No olvide esta información, pues será crucial para el entendimiento de este tema.
 
Para finalizar este punto diremos que, la mayoría de las veces que una persona lee por primera
vez la forma en que Dios contabiliza los días, le resulta extraño y difícil de asimilar, sobre todo
cuando se vive día a día bajo otro esquema de contar los días (de las 12 de la noche a las
doce de la noche; forma romana). Pero es importante que usted sepa que el sistema bajo el
cual está regido el mundo, no es el del Dios Eterno, sino el de un poder que se opone en todo a
él, aún en la forma de contar el tiempo. Esto está claramente documentado por el profeta
Daniel: “23 Y dijo: El cuarto monstruo será un cuarto reino que habrá sobre la tierra, diferente
de todos los demás. Devorará toda la tierra, la pisoteará y la destrozará. 24 Los diez cuernos
son diez reyes que reinarán en ese reino. Después de ellos subirá otro al poder (el sistema
papal), que será muy diferente de los primeros y que derribará a tres de estos reyes. 25
Insultará al Dios altísimo e irá acabando con su pueblo; tratará de cambiar la ley de Dios y las
fiestas religiosas…” (Daniel 7.23-25, DHH).
 
2.2 SÁBADOS SEMANALES Y ANUALES (O FESTIVOS)
Primero es importante entender que la palabra “Sábado” proviene del término hebreo “Shabat”
que quiere decir “reposar, descansar, reposo” (Strong #Hbr. 7673).
 
En la Biblia podemos encontrar dos tipos de “sábados o reposos” establecidos por Dios:
a) El “sábado semanal”. Este lo encontramos mencionado por primera vez al finalizar el relato
de la creación: “2 Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de
toda la obra que hizo. 3 Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó (hbr.
shabát) de toda la obra que había hecho en la creación (Génesis 2.2-3). Un reposo que el Dios
Eterno dio para el hombre, para toda la humanidad, y así lo corrobora el mismo Señor
Jesucristo: “También les dijo: El sábado por causa del hombre es hecho; no el hombre por causa
del sábado” (Marcos 2.27, RV1909). Y aún más, el Hijo de Dios se presenta como el dueño de
este día: “Así que el Hijo del hombre es Señor aun del sábado” (Marcos 2.28, RV1909). Este
reposo sigue vigente hasta hoy y lo estará cuando Cristo establezca su reino de mil años sobre
la Tierra: “22 Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra, que yo hago, permanecen
delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra simiente y vuestro nombre. 23 Y será que
de mes en mes, y de sábado en sábado, vendrá toda carne á adorar delante de mí, dijo Yahvéh”
(Isaías 66.22-23, RV1909).
 
b) Los “sábados anuales o festivos”. Estos los encontramos mencionados por primera vez en
el libro de Levítico: “1 Y hablo Yahvéh á Moisés, diciendo: 2 Habla á los hijos de Israel, y diles:
Las solemnidades de Yahvéh, las cuales proclamaréis santas convocaciones, aquestas serán mis
solemnidades (Levítico 23.1-2). Estos sábados son:
 
b.1) Los sábados anuales de la fiesta de los Panes sin levadura
6 Y a los quince días de este mes (primer mes: aviv o nisán) es la fiesta solemne de los panes
sin levadura a Yahvéh; siete días comeréis panes sin levadura. 7 El primer día tendréis santa
convocación; ningún trabajo de siervos haréis (es día de reposar, es un sábado). 8 Y ofreceréis a
Yahvéh siete días ofrenda encendida; el séptimo día (21 de aviv o nisán) será santa
convocación; ningún trabajo de siervo haréis (es día de reposar, es un sábado) [Levítico 23.6-
8, RV1960]. El primer sábado anual (15 de aviv) de esta fiesta será relevante para determinar
el tiempo de la muerte y resurrección de Cristo.
 
[Nota: Aviv o nisán (Éxodo 12.2 y 13.4) es el primer mes del calendario divino y ocurre
durante los meses de marzo/abril del calendario gregoriano; ubique el mes y la festividad en
la imagen inferior del calendario].
 
b.2) El sábado anual de la fiesta de las Semanas o Pentecostés (50 días)
15 Y contaréis desde el día (16 de aviv o nisán) que sigue al día de reposo (15 de aviv), desde
el día en que ofrecisteis la gavilla de la ofrenda mecida; siete semanas cumplidas serán. 16
Hasta el día siguiente del séptimo día de reposo (15 de aviv) contaréis cincuenta días; entonces
ofreceréis el nuevo grano a Yahvéh. 21 Y convocaréis en este mismo día santa convocación;
ningún trabajo de siervos haréis (día de reposar, sábado anual: 6 de siván); estatuto perpetuo
en dondequiera que habitéis por vuestras generaciones (Levítico 23.15-16, 21).
 
[Nota: Siván (Ester 8.9) es el tercer mes del calendario divino y ocurre durante los meses de
mayo/junio del calendario gregoriano; ubique el mes y la festividad en la imagen inferior
del calendario].
 
b.3) El sábado anual de la fiesta acompañada con Toque de Trompetas
23 Y habló Yahvéh a Moisés, diciendo: 24 Habla a los hijos de Israel y diles: En el mes séptimo
(ethanim o tishri), al primero del mes tendréis día de reposo, una conmemoración al son de
trompetas, y una santa convocación. 25 Ningún trabajo de siervos haréis (día de reposar,
sábado anual: 1 de ethanim); y ofreceréis ofrenda encendida a Yahvéh (Levítico 23.23-25).
 
[Nota: Ethanim o Tishri (1 Reyes 8.2) es el séptimo mes del calendario divino y ocurre
durante los meses de septiembre/octubre del calendario gregoriano; ubique el mes y la
festividad en la imagen inferior del calendario].
 
b.4) El sábado anual de la fiesta del Día de la Expiación
26 También habló Yahvéh a Moisés, diciendo: 27 A los diez días de este mes séptimo (ethanim)
será el día de expiación; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis
ofrenda encendida a Yahvéh. 31 Ningún trabajo haréis; estatuto perpetuo es por vuestras
generaciones en dondequiera que habitéis. 32 Día de reposo (sábado anual) será a vosotros, y
afligiréis vuestras almas, comenzando a los nueve días del mes en la tarde; de tarde a tarde
guardaréis vuestro reposo (Levítico 23.26-27, 31-32).
 
b.5) Los sábados anuales de la fiesta de los Tabernáculos o Cabañas
33 Y habló Yahvéh a Moisés, diciendo: 34 Habla a los hijos de Israel y diles: A los quince días de
este mes séptimo (ethanim o tishri) será la fiesta solemne de los tabernáculos a Yahvéh por
siete días. 35 El primer día habrá santa convocación; ningún trabajo de siervos haréis (día de
reposar o sábado anual). 36 Siete días ofreceréis ofrenda encendida a Yahvéh; el octavo día (22
de tishri) tendréis santa convocación, y ofreceréis ofrenda encendida a Yahvéh; es fiesta, ningún
trabajo de siervos haréis (día de reposar, sábado anual) [Levítico 23.33-36].
 
Como usted ha podido observar, estos “sábados anuales o festivos” estaban sujetos a una fecha
fija determinada por Dios, por lo cual año con año podían caer en diferente día de la semana.
 
 
2.3 EL TIEMPO EN QUE SE DEBÍA SACRIFICAR LA PASCUA
Al pueblo de Israel le fue dicho por Dios: "En el mes primero, a los catorce del mes, entre las
dos tardes, pascua es de Yahvéh" (Levítico 23.5). Esto indicaba que el 14 de aviv entre las dos
tardes sería el tiempo para que el pueblo de Israel sacrificara al cordero que se comería en la
Pascua: “Y lo guardaréis hasta el día catorce de este mes, y lo inmolará toda la congregación del
pueblo de Israel entre las dos tardes” (Éxodo 12.6).
 
El significado de la expresión "entre las dos tardes" siempre ha sido muy debatido, pero lo
podemos deducir fácilmente mediante el hecho de que, si Jesús vino a ser la realidad de aquel
cordero pascual, tuvo que morir al mismo tiempo. Y de hecho así ocurrió, Cristo como nuestra
pascua fue sacrificado (muerto) a la hora nona, es decir, a las tres de la tarde del día 14 de
aviv: “44 Cuando era como la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora
novena (tres de la tarde). 45 Y el sol se oscureció, y el velo del templo se rasgó por la mitad. 46
Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y
habiendo dicho esto, expiró” (Lucas 23.44-46). Años más tarde el apóstol Pablo fue inspirado
por Dios, para escribir que “nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros” (1
Corintios 5.7), confirmando con ello que el Hijo de Dios fue sacrificado al mismo tiempo que el
cordero pascual, es decir, el día 14 de aviv o nisán a las tres de la tarde (vea el diagrama
inferior).
 

 
Existen fuentes externas a la Biblia que corroboran que la expresión “entre las dos tardes”
debe ser entendida como las “tres de la tarde” del horario actual:
 
--Jewish Enciclopedia, artículo “paschal-sacrifice”: “El animal fue muerto en la víspera de
la Pascua, en la tarde del 14 de Nisán, después de que el sacrificio Tamid (sacrificio continuo)
había muerto, es decir, a las tres…”
(http://www.jewishencyclope-dia.com/articles/11926-paschal-sacrifice).
 
--Antigüedades de los judíos de Flavio Josefo: “… Se podrá ver con cuánto fervor adoramos
a Dios y observamos sus leyes; los terrores del asedio no impedían que los sacerdotes ofrecieran
los sacrificios; lo hacían dos veces, por la mañana y en la hora nona [tres de la tarde] …” (Tomo
III, libro XIV, capítulo IV, sección 3, editorial Clie).
 
--Con respecto a la expresión “entre las dos tardes” que aparece en Éxodo 12.6, “La
Torá con Rashí”, comenta lo siguiente: “Puesto que el término ‘éreb’ se aplica al
ensombrecimiento y oscurecimiento de algo, y en el día hay dos periodos de oscurecimiento –el
del atardecer con respecto a la mañana y el de la noche con respecto a la tarde--, el periodo
intermedio recibe el nombre en plural de “beyn ha'arba'im”, que literalmente significa ‘entre los
oscureceres’ (Shemot 12.6, pág. 140, nota 136).
 
“Éreb” (Strong Hbr #6153): De “aráb” (#6150); anochecer, oscurecer, tarde
 
“Beyn” (Strong Hbr #996): En medio de, entre.
 
--Con respecto a la expresión “entre las dos tardes” que aparece en Levítico 23.5, “La
Torá con Rashí”, comenta lo siguiente: “En hebreo ‘ereb’ es propiamente todo el periodo del
atardecer, hasta la caída de la noche. Designa el momento a partir del cual el día comienza a
‘ensombrecerse´, es decir, después del mediodía, que es la sexta hora del día” (Vayikrá 23.5,
pág. 410, nota 204). Y aún añade: “El primer día de la festividad de Pésaj no comienza sino
hasta el 15 de Nisán, como se indica en el versículo siguiente (23.6); aquí se habla del tiempo
de (sacrificar) la ofrenda de Pésaj, no del día mismo (Vayikrá 23.5, pág. 410, nota 205).
 
Después de lo explicado anteriormente, los siguientes versos deben ser entendidos
bajo la idea de estarse refiriendo al momento de sacrificar la Pascua (Ofrenda de
Pésaj), el 14 de aviv entre las dos tardes o 3 de la tarde:
Números 9.5
RV1909: E hicieron la pascua en el mes primero, A los catorce días del mes, entre las dos
tardes, en el desierto de Sinaí: conforme a todas las cosas que mandó Yahvéh á Moisés, así
hicieron los hijos de Israel.
Tanaj, Ed. Katz: Y ellos hicieron la ofrenda de Pésaj en el (mes) primero, en el día catorce del
mes, al atardecer, en el desierto de Sinay. Como todo lo que había ordenado el Eterno a Moshé,
así hicieron los hijos de Israel.
 
Números 28.16
RV1909: Más en el mes primero, a los catorce del mes será la pascua de Yahvéh.
Tanaj, Ed. Katz: En el mes primero en el día catorce del mes, será (la ofrenda de) Pésaj al
Eterno.
 
Deuteronomio 16.2, 4, 5
RV1909: 2 Y sacrificarás la pascua a Yahvéh tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar
que Yahvéh escogiere para hacer habitar allí su nombre. 4…y de la carne que matares a la tarde
del primer día, no quedará hasta la mañana.5 No podrás sacrificar la pascua en ninguna de tus
ciudades, que Yahvéh tu Dios te da.
Tanaj, Ed. Katz: 2 Sacrificarás la ofrenda de Pésaj delante del Eterno, tu Dios, de ovejas y
vacunos; en el lugar que eligiere el Eterno para establecer su nombre allí. 4…No quedará de la
noche la carne, que has sacrificado en el atardecer (víspera) del primer día, hasta el amanecer.
5 No podrás sacrificar el Pésaj en ninguno de tus portones, que el Eterno, tu Dios, te entrega.
 
Josué 5.10
RV1909: Y los hijos de Israel asentaron el campo en Gilgal, y celebraron la pascua a los catorce
días del mes, por la tarde, en los llanos de Jericó.
Tanaj, Ed. Katz: Acamparon los hijos de Israel en Gilgal, y celebraron Pésaj el día catorce del
mes, por la tarde, en las estepas de Yerijó.
 
2 Crónicas 35.1
R1909: Y Josías hizo pascua a Yahvéh en Jerusalem, y sacrificaron la pascua a los catorce del
mes primero.
Tanaj, Ed. Katz: Realizó Yoshiyahu en Yerushalaim (la ofrenda de) Pésaj al (honor del) Eterno;
y degollaron el (sacrificio de) Pésaj en el (día) catorce del mes primero.
 
Esdras 6.19-20
RV1909: 19 Y los de la transmigración hicieron la pascua a los catorce del mes primero. 20
Porque los sacerdotes y los Levitas se habían purificado á una; todos fueron limpios: y
sacrificaron la pascua por todos los de la transmigración, y por sus hermanos los sacerdotes, y
por sí mismos.
Tanaj, Ed. Katz: 19 Hicieron los hijos (procedentes) del destierro el (sacrificio de) Pésaj, en el
(día) catorce del mes primero. 20 Porque se habían purificado los kohanim y los leviím a una
(vez), (quedando) todos puros. Entonces (los leviím) degollaron el (sacrificio de) Pésaj para
todos los hijos procedentes del destierro, para sus hermanos los kohanim y para ellos (mismos).
 
Ezequiel 45.21
RV1909: El mes primero, a los catorce días del mes, tendréis la pascua, fiesta de siete días:
comeráse pan sin levadura.
Tanaj, Ed. Katz: En el (mes) primero, en el día 14 del mes, será para ustedes el Pésaj; una
festividad de siete días. Galletas ázimas se comerá.
 
2.4 LA NOCHE EN QUE SE DEBÍA CENAR LA PASCUA
Siendo que el cordero era sacrificado el 14 de aviv entre las dos tardes, tres de la tarde, este se
comenzaba a comer el 15 de aviv en la noche, así lo podemos comprobar en el registro bíblico:
“7 Y tomarán de la sangre, y la pondrán en los dos postes y en el dintel de las casas en que lo
han de comer. 8 Y aquella noche (la del 15 de aviv) comerán la carne asada al fuego, y panes
sin levadura; con hierbas amargas lo comerán. 9 Ninguna cosa comeréis de él cruda, ni cocida
en agua, sino asada al fuego; su cabeza con sus pies y sus entrañas. 10 Ninguna cosa dejaréis
de él hasta la mañana; y lo que quedare hasta la mañana, lo quemaréis en el fuego. 11 Y lo
comeréis así: ceñidos vuestros lomos, vuestro calzado en vuestros pies, y vuestro bordón en
vuestra mano; y lo comeréis apresuradamente; es la Pascua de Jehová. 12 Pues yo pasaré
aquella noche (la del 15 de nisán) por la tierra de Egipto, y heriré a todo primogénito en la tierra
de Egipto, así de los hombres como de las bestias; y ejecutaré mis juicios en todos los dioses de
Egipto. Yo Yahvéh. 13 Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la
sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra
de Egipto. 14 Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Yahvéh
durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis (Éxodo 12.7-14).
 
Después de esta lectura se puede determinar que fue el 15 de aviv al anochecer, es decir, al
comenzar el día, cuando Israel se encontraba cenando la Pascua mientras el ángel de Dios
pasaba hiriendo al primogénito de las casas que no estuvieran marcadas con la sangre del
cordero pascual. En otras palabras, "La Cena de la Pascua" en Egipto ocurrió el 15 de aviv.
 
La confirmación de que “La Cena de la Pascua” ocurrió en Egipto el 15 de aviv por la noche, y
que seguía ocurriendo en la misma fecha en los días de Jesús, la encontramos en Juan 18.28:
“Llevaron a Jesús de la casa de Caifás al palacio del gobernador romano. Como ya comenzaba a
amanecer (14 de aviv en la mañana), los judíos no entraron en el palacio, pues de lo contrario
faltarían a las leyes sobre la pureza ritual y entonces no podrían comer la cena de Pascua (el 15
de aviv)” [Versión Dios Habla Hoy (DHH)].
 
Esto también es posible comprobarlo por lo expresado en Lucas 22.1: "Estaba cerca la fiesta de
los panes sin levadura, que se llama la pascua", Con esto podemos ver que la “Cena de la
Pascua” y la “Festividad de los Panes sin levadura” ocurrían al mismo tiempo, es decir, el
15 de aviv por la noche: “6 Y a los quince días de este mes [aviv] es la fiesta solemne de los
panes sin levadura a Yahvéh; siete días comeréis panes sin levadura” (Levítico 23.6).
 
Existen fuentes externas a la Biblia que corroboran que “la cena de la Pascua” siempre ha sido la
noche del 15 de aviv:
 
--La Torá con Rashí, Vayikrá 23.5: “El primer día de la festividad de Pésaj no comienza sino
hasta el 15 de Nisán, como se indica en el versículo siguiente (Vayikrá/Levítico 23.6); aquí se
habla del tiempo de la ofrenda de Pésaj, no del día mismo” (Pág. 410, nota 205).
 
--En Yaacob, Las enseñanzas del Talmud: “En Shemot 12.11, la Torá dice respecto al
momento en que se debe comer la ofrenda de Pésaj, la noche del 15 de nisán” (Berajot I, pág.
115, nota 565, editorial Jerusalén de México).
 
Después de lo explicado anteriormente, los siguientes versos deben ser entendidos
bajo la idea de estarse refiriendo al momento de Cenar la Pascua al iniciar el 15 de
aviv (por la noche):
Deuteronomio 16.6
RV1909: Sino en el lugar que Yahvéh tu Dios escogiere para hacer habitar allí su nombre,
sacrificarás la pascua por la tarde a puesta del sol, al tiempo que saliste de Egipto.
Tanaj, Ed. Katz: Sino en el lugar que eligiere el Eterno, tú Dios para establecer su nombre allí,
sacrificarás el Pésaj, al atardecer, (comiéndolo) cuando se ponga el sol, en la fecha de tu salida
de Egipto.
 
Isaías 30.29
RV1909: Vosotros tendréis canción, como en noche en que se celebra pascua; y alegría de
corazón, como el que va con flauta para venir al monte de Jehová, al Fuerte de Israel.
Tanaj, Ed. Katz: Un cantar habrá para ustedes, como el de la noche (de Pésaj) en que se
santifica la festividad. Y la alegría de corazón, como el que marcha con la flauta para ir hacia el
monte del Eterno, delante del Fuerte (protector) de Israel.
 
2.5 LA TEORÍA DE DOS PASCUAS EN EL TIEMPO DE CRISTO DEBE SER DESECHADA
Hay quienes por leer que el relato del Evangelio presenta a Jesús celebrando la Pascua (Mateo
26.17-19; Marcos 14.12-16; Lucas 22.7-16) y a los judíos celebrando otra 24 horas después
(Juan 18.28,39; 19.14,31,42), han buscado explicar esto echando mano del argumento de
que en aquel tiempo existían dos costumbres en la celebración de la Pascua. Por un lado,
afirman que “los israelitas que eran galileos y los samaritanos la celebraban al principio
del día 14, tal y como se hizo en Egipto”. Y además añaden: “La otra costumbre,
observada por los israelitas judíos de ese tiempo, que ya había unificado en un solo día
el sacrificio del cordero con el comienzo de los panes sin levadura, porque era la
misma fiesta que se llevaba durante siete días complementarios (Marcos 14.12; Lucas
22.1)”.
 
Primeramente debemos darnos cuenta que muchos de los traductores de los escritos sagrados,
por su ignorancia de las leyes divinas, erraron y siguen errando al hacer sus traducciones y eso
ha provocado una gran confusión en los lectores.
 
En cuanto a la teoría de “dos pascuas”, pensar así es errar de lo dicho por las Escrituras
(Mateo 22.29) y romper con todo lo establecido desde antigüedad por Dios a este respecto: El
sacrificio de la pascua el día 14 de aviv entre las dos tardes o 3 de la tarde (vea el punto 2.3).
La cena de la Pascua el 15 de aviv al iniciar, por la noche (vea el punto 2.4).
 
Por otra parte, los que se apoyan en esta teoría olvidan que los depositarios de la voluntad
divina son los israelitas (Romanos 9.4-5) y no los samaritanos (Juan 4.19-22) y que a
pesar de su condición rebelde de los primeros, sus enseñanzas son correctas (Mateo 23.2-3).
 
Pero el mayor error al pensar que el Hijo de Dios comió la Pascua la noche anterior a su muerte,
es el convertirlo en un infractor de la ley, tanto en el tiempo en que se debía sacrificar la pascua
(Éxodo 12.6), como en el tiempo que se debía comer (Deuteronomio 16.6, Tanaj, Ed.
Katz). Pero la Escritura elimina por completo esto al presentarlo como un individuo siempre
sujeto a la voluntad divina y por consecuencia sin pecado, sin infracción a la ley (1 Pedro 2.22,
2 Corintios 5.21 y 1 Juan 3.4-5).
 
El Hijo de Dios no comió la Pascua y mucho menos la adelantó el año que murió, más bien ese
año él fue la Pascua para la salvación de todo el género humano: “Nuestra pascua, que es
Cristo, ya fue sacrificada por nosotros” (1 Corintios 5.7).
 
Entonces, ¿qué fue lo que realizó el Hijo de Dios con sus discípulos la noche anterior a su
muerte? Una cena y a la vez un memorial en la que sencilla y claramente estableció los
emblemas del Nuevo Pacto y anunció su muerte a sus seguidores. De esto da testimonio el
apóstol Pablo: “23 Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor
Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan; 24 y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo:
Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.
25 Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo
pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí. 26 Así,
pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor
anunciáis hasta que él venga” (1 Corintios 11.23-26).