EXPERIENCIAS DE FOGONES participar a gente de varios caserios o
MEJORADOS EN EL ESTADO FALCÓN,
VENEZUELA.
A partir del año 1997 Cetep fue invitado
por un grupo de personas de la Sierra de
Coro a desarrollar el proyecto de los
Fogones de leña Mejorados en la zona de
Curimagua, Guayapa, Macanillas, del
Municipio Petit.
Desde ese momento en muchas
comunidades mostraron gran interés y
disposición para apropiarse del proyecto,
no solo de la tecnología del fogón, sino
también de sus aspectos metodológicos y
organizativos. Surgieron así muchos
voluntarios y voluntarias que asumieron las
diferentes responsabilidades que se
requerían.
Se puede decir que, gracias al interés y
compromiso de los grupos interesados, el
proyecto se regó como pólvora, logrando
beneficiar a cientos de familias de un
amplio sector de la sierra de Coro y tuvo
sus impactos hasta en la propia ciudad
capital del estado. (1998-2000)
Los Fogones de leña Mejorados se
desarrollaron como un proyecto que
combinaba tecnologías con procesos
humanos y organización. Sus impactos han
sido múltiples a nivel de la mejora de las
condiciones materiales de vida de la
población, de las condiciones de trabajo
de la mujer en el ámbito familiar, en la
conservación ambiental de toda la zona y
en la consolidación de las organizaciones
comunitarias involucradas.
Fueron muchas las actividades
organizadas en las que se invitaba a
pueblos, incluso gente de Coro. Así fue
como conocimos a gente valiosa que
llevaba actividades con grandes
responsabilidades a nivel de alcaldías,
institutos oficiales y universidades.
Dos décadas después (2020) y en el marco
de las sanciones de todo tipo impuestas al
país por el imperio USA, el movimiento
comunero de otra zona de Falcón decidió,
ante la gran escasez de gas doméstico que
se presentó ese año, buscar la solución a
esta situación via autogestión, por medio
de los Fogones.
El Consejo Comunal de Guaibacoa y la
Comuna Carubarigua, a la que pertenece,
asumieron el liderazgo de esta situación,
entraron en contacto con algunas personas
que ya conocían la experiencia antes
citada y arrancaron el trabajo.
Lo primero que se hizo fue un taller de
elaboración de adobes en Guaibacoa,
(municipio Colina) que incluyó el manejo del
barro, ya que los adobes son de barro y
son el material básico para hacer los
Fogones. Una vez logrado el dominio de la
tecnología del adobe, se empezaron a
levantar los primeros fogones que
reflejaron diversos estilos y modelos
según los gustos de cada familia. Ese
proceso permitió poco a poco irse
apropiando también de la tecnología del
fogón. Surgieron fogones más bajos, más
altos, de dos o tres hornillas, con hornos o
sin hornos, con chimeneas de varios tipos,
toda una riqueza cultural que facilitó la
formación práctica y local de diversas
personas como técnicos en construcción
de fogones.
Todo ese empuje inicial se tradujo en el
impacto hacia otras comunidades de los
alrededores, de otros consejos comunales,
donde muchas familias quisieron construir
sus fogones mejorados con apoyo de los
técnicos de Guaibacoa. Así se fue creando
un proceso colectivo, solidario y
multiplicador que elevó el número de
familias beneficiarias en cuyas viviendas
el fogón de leña mejorado es ahora el
centro de la dinámica familiar.
Dos años después de iniciado ese proceso
transformador, y dados los resultados
alcanzados, se planteó el reto de
organizar un encuentro con otras
comunidades que también tienen
experiencia con fogones. Ese encuentro se
llevó a cabo en Guaibacoa, los días 1 y 2 de
julio del 2022, con el protagonismo
principal de la bella gente de dicha
comunidad, como parte de la Comuna
Carubarigua, y con apoyo de la Universidad
Territorial de Coro (UPTAG) y de Cetep.
Asistieron al encuentro unas 50 personas,
la mayoría de ellas pertenecientes al
ámbito de la comuna; también estuvieron
algunas personas de Coro y La Vela, de la
sierra de Curimagua y de Barquisimeto.
En dicho encuentro se pudo apreciar los
avances del trabajo local, concretado en
innumerables fogones de diversos modelos
y en el fortalecimiento del tejido social en
el ámbito de la Comuna. Se pudo apreciar
también el impacto de los fogones en el
trabajo de preparación de los alimentos, la
reactivación de la producción casera de
panes, tortas, conservas y otras maravillas
del hogar.
Se destacó durante el encuentro que los
proyectos de Fogones de leña Mejorados
trascienden a los hogares y viviendas
campesinas para alcanzar a beneficiar las
Casas de Alimentación que cuentan con la
participación del Poder Popular organizado
y escuelas y locales de cooperativas.
Igualmente se destacó como los fogones
se convierten en herramientas para la
vinculación del quehacer comunitario con
la transformación social. Hemos visto y
sentido que con los fogones no hay que
empujar a nadie sino que la motivación es
colectiva y se va fortaleciendo por el
método “de campesino a campesino”.
Beneficia la higiene de la casa e involucra
a toda la familia, incluso a los niños y en
especial reconoce el papel activo de la
mujer en su consolidación.
Hubo muchas inquietudes planteadas en
relación a la necesidad de llegar a dominar
la tecnología de construcción de los
fogones hechos todos de barro, como uno
ya construido en la población de Dos
Caminos.
De la misma manera, se plantean como
retos futuros la constitución de las
brigadas de maestros fogoneros que
ayuden a consolidar y multiplicar el
proyecto en cada comunidad así como
también el desarrollo de una tecnología
popular para la fabricación de briquetas
adaptadas a los fogones, tema en el que ya
está trabajando la Universidad territorial.