Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
DERECHO
LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA
ASIGNATURA:
PSICOLOGÍA DE LA SALUD
DOCENTE:
THULIN JORGENSEN PER HENNING
AUTORES:
LÓPEZ OLVERA DAVID SALVADOR
LÓPEZ CARRANZA GÉNESIS ADRIANA
MERCHÁN ESCOBAR CINTHYA XIOMARA
LLORENTY SALAZAR INGRID ROXANA
MORETA MENDONZA LIBIA MATILDE
MIRANDA SALINAS MARÍA JOSÉ
DAVIS STEVEN NAVARRO QUINTO
TEMA:
HISTORIA ANTECEDENTES DE LA PSICOLOGÍA DE LA SALUD EN EL
ECUADOR
NIVEL Y PARALELO:
7MO SEMESTRE “A1”
FECHA DE ENTREGA:
LUNES, 18 DE JULIO DE 2022
MILAGRO- ECUADOR
2022
INTRODUCCIÓN
La relación mente-cuerpo
Durante la Edad Media se produjo un giro en esta concepción hacia una visión dualista
del ser humano según la cual, dentro de cada persona, hay un espíritu eterno que vive
dentro de un cuerpo finito. Este enfoque fue cada vez más dominante debido al poder
de la Iglesia Católica. Su influencia en la práctica médica era tal que, en el año 1139,
el Papa Inocencio II dictó una norma por la que prohibía a los sacerdotes otorgar
medicina, con objeto de que se dedicaran más a las prácticas de su ministerio. De
modo que, una enfermedad era producto de la violación de una ley divina y la curación
era la fe y arrepentimiento del pecado (Kort, 1995).
El modelo biomédico
Engel en 1977 puso en manifiesto algunas de las insuficiencias que esta perspectiva
biomédica presenta a la hora de tratar la enfermedad, entre ellas:
El modelo biopsicosocial
Este modelo fue elaborado por Engel en 1977 y representa un intento de integrar los
tres factores: biológicos, psicológicos y sociales (Juarez, 2011).
Además, este tipo de enfermedad constante, con la que el paciente necesita cohabitar
durante mucho tiempo, normalmente implica una progresión de cambios significativos
en su estilo y satisfacción personal (por ejemplo, mantener una gran adherencia a
medicamentos persistentes) que los individuos deben ajustar (González, 2008).
Por esta gran cantidad de razones y en pleno avance de este punto de vista emergente
de las condiciones médicas, la Asociación Americana de Psicología (APA) hizo, en
1978, como una mayor cantidad de sus divisiones, 38 explícitamente, la Psicología de
la Salud (división de cerebro ciencia del bienestar) que, al año siguiente, en 1979,
distribuyó su manual más memorable Psicología de la Salud. En 1982, la agenda de
esta división de la APA también aparecía bajo el título de Psicología de la Salud
(González, 2008).
En este plan de Matarazzo se recogen las cuatro profesiones centrales del analista de
bienestar. En cualquier caso, sobresale el fomento y mantenimiento de la salud, que
incorporaría todo el alcance de las misiones encaminadas a fomentar las
propensiones sólidas. La segunda profesión es la prevención y el tratamiento de la
infección. La investigación del cerebro del bienestar destaca la necesidad de cambiar
las propensiones indeseables para prevenir la enfermedad, sin dejar de recordar que
es factible trabajar con aquellos pacientes que experimentan los efectos nocivos de
enfermedades en las que ciertos factores de conducta son vitales, así como mostrar
individuos que a partir de ahora se ha enfermado para adaptarse mejor a su nueva
situación o averiguar cómo seguir los regímenes de tratamiento. En tercer lugar, la
ciencia del cerebro de la salud también se centra en la investigación de la etiología y
las relaciones entre la salud, la enfermedad y la debilidad. En esta singular situación,
la etiología alude a la investigación de las causas (conductuales y sociales) del
bienestar y la enfermedad (González, 2008).
Estos incluirían propensiones a las que se alude como el uso de licor, tabaco, actividad
real o el enfoque para manejar situaciones angustiosas. Por último, la investigación
del marco de bienestar y el detalle de una estrategia de bienestar también se acreditan
como habilidades de investigación del cerebro de bienestar. En pocas palabras,
estaría relacionado con diseccionar el efecto de los establecimientos de salud y los
expertos en la forma de comportarse de la población y crear sugerencias para
desarrollar aún más los servicios médicos (González, 2008).
Lo que se considera como una salud y enfermedad varía entre las culturas y como
resultado del entorno cultural, y económico de la época en la que vive una persona,
debido a eso es importante la influencia cultural, ya que ha intervenido en lo que es
salud y enfermedad porque cada cultura tiene diferentes hábitos unos más saludables
que otras (Duque, 2007).
Varias culturas orientales la China y Japón han mostrado una ejecución global y
colectivista sobre la salud y enfermedad (Duque, 2007).
Por otro lado, si se etiqueta determinado comportamiento como enfermizo, este varia
en gran medida las consecuencias de las que se producirían si el comportamiento
fuera etiquetado como distorsión de la reglas o pautas; por ejemplo, las respuestas
sociales al uso de drogas ilícitas han pasado de la criminalización y prohibición a ser
considerado como enfermedad la cual requiere de un tratamiento (Duque, 2007).
En cambio, por parte de la salud podemos mencionar que para tener una buena salud
o calidad de vida se puede considerar tres elementos de la naturaleza humana. Lo
cual, estos se integran acorde a la manera en que una persona los contempla y
atienden. Es por eso que desde una visión holística se toma en cuenta los aspectos
sociales, biológicos, espirituales y los interpersonales. En donde, la salud se trata del
estado integrado que está conformado por todos estos elementos (Duque, 2007).
Las conductas saludables son las distintas actitudes orientadas hacia la salud que
adoptan las personas y que están influidas por el entorno social, político y económico
en el que viven. La aplicación de las teorías cognitivas sobre la motivación humana se
ha visto sumergida en la conducta de la salud y la prevención de las enfermedades
(Beltrán, 2017).
Además, se analizan las superficies con las que se relaciona la Psicología de la Salud,
las primordiales aplicaciones en salud y patología. Se concluye que la Psicología de
la Salud constituye una estupenda elección para entender los mecanismos de la salud
y la patología, así como para la prevención y el desempeño de la patología, en lo cual
tiene relación con sus elementos psicológicos. La salud mental es tan antigua como
la vida de las personas y el Ecuador, al igual que otras naciones latinoamericanas,
atravesó una secuencia de procesos desde la América aborigen, la colonia y la
república, cada fase con aportes y desaciertos en el campo académico y asistencial.
Finalmente, hay que hacer notar que la Psicología de la Salud ha alcanzado tal
desarrollo en los últimos tiempos, que está ya en condiciones de elaborar no sólo
tácticas de trabajo para la solución de los más diversos problemas concretos, sino
estrategias generales, globales, para el enfrentamiento de estos problemas y el logro
de beneficios en los sistemas y servicios de salud, estas estrategias pueden
convertirse con el pasar del tiempo en un motor autopropulsor del desarrollo posterior
de la disciplina.
BIBLIOGRAFÍA
Baeta, M. (2015). Cultura y modelo biomédico: reflexiones en el proceso de salud-
enfermedad. Comunidad y Salud, 13(2), 81-83. Obtenido de
https://www.redalyc.org/pdf/3757/375743552011.pdf
Piña, J. (2010). El rol del psicólogo en el ámbito de las salud: de las funciones a las
competencias profesionales. Enseñanza e Investigación en Psicología, 15(2),
233-255. Obtenido de https://www.redalyc.org/pdf/292/29215980001.pdf