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Introducción:
1.4. Anticipación
2.1. Argumento
2.2. Argumento:
2.1. I. S: Derechos humanos y justicia global ante esta llamada gestación subrogada.
2.1. I.T.: El caso Baby Gammy nos permite abrir los ojos a las realidades ocultas del
negocio transnacional de la gestación subrogada.
2.2. I.T.: El boom del turismo reproductivo, una forma de outsourcing a países
empobrecidos
3. Conclusión:
3.1. Síntesis de los argumentos: La gestación subrogada suspende el derecho de
autodeterminación sobre el propio cuerpo y los mismos derechos de filiación. La autonomía
como principio irrenunciable no admite alquileres ni hipotecas. La autonomía no debe ser
cancelada temporalmente bajo ninguna circunstancia.
3.2. Comentario crítico: A pesar de que, el bando a favor del alquiler de vientres enfatiza los
beneficios de la práctica, entre los cuales se cuentan la diversidad de opciones reproductivas y
concesiones para el pluralismo sexual. Pero, aunque esas puedan ser consideraciones genuinas
e importantes, no se las puede poner por encima de la necesidad de evitar la explotación de
algunas de las mujeres más vulnerables del mundo
La gestación subrogada, es una alternativa, de gestación asistida para madres con ausencia del
útero, malformación uterina o por contraindicación médica, ya sea, relativa o absoluta. Donde
la madre gestante aporta el útero, para la formación del bebé. En este caso, nos planteamos si
se debe dar la aprobación a la gestación subrogada como método de reproducción asistida
para personas que no puedan concebir. Desde nuestra perspectiva, la gestación subrogada es
moralmente indeseable y, en consecuencia, a nuestro juicio, debería de estar prohibida. A
continuación, les mostraremos nuestros argumentos.
Del mismo modo, como es el caso de la mayoría de los embarazos, la mujer gestante establece
un vínculo madre-hijo. Ante esta situación, produce que a veces sea difícil entregarlo. Además
de ello, las mujeres podrían ver disminuida su independencia, ya que, en los contratos de
gestación, existen restricciones en el estilo de vida de la gestante, lo que puede generar una
sensación de falta de control sobre su propia vida y lo que está ocurriendo. En este caso,
Nicolás Jouve de la Barreda, señala en perspectivas biomédicas que “existen manifestaciones
emocionales propias del embarazo, tales como sentimientos de tipo depresivo, fluctuaciones
en el estado de ánimo, hipersensibilidad emocional, inestabilidad, preocupación y
somatizaciones. Al mismo tiempo, existe tristeza por la pérdida del estado anterior, así como
por la pérdida de atractivo físico y de la independencia”. (Nicolás Jouve, Fuente 5 p. 9).
Anexando a esto, existe un suceso muy impactante como lo es, “el caso Baby Gammy, que nos
permite abrir los ojos a las realidades ocultas del negocio transnacional de la gestación
subrogada. Una pareja australiana rechazó al bebé «defectuoso» ‒con síndrome de Down‒
como si fuera mercancía averiada que se puede devolver”. (Injusticia global: el negocio
transnacional de la gestación subrogada3, Fuente 1 p.3)