Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Esta es una copia digital de un libro que, durante generaciones, se ha conservado en las estanterías de una biblioteca, hasta que Google ha decidido
escanearlo como parte de un proyecto que pretende que sea posible descubrir en línea libros de todo el mundo.
Ha sobrevivido tantos años como para que los derechos de autor hayan expirado y el libro pase a ser de dominio público. El que un libro sea de
dominio público significa que nunca ha estado protegido por derechos de autor, o bien que el período legal de estos derechos ya ha expirado. Es
posible que una misma obra sea de dominio público en unos países y, sin embargo, no lo sea en otros. Los libros de dominio público son nuestras
puertas hacia el pasado, suponen un patrimonio histórico, cultural y de conocimientos que, a menudo, resulta difícil de descubrir.
Todas las anotaciones, marcas y otras señales en los márgenes que estén presentes en el volumen original aparecerán también en este archivo como
testimonio del largo viaje que el libro ha recorrido desde el editor hasta la biblioteca y, finalmente, hasta usted.
Normas de uso
Google se enorgullece de poder colaborar con distintas bibliotecas para digitalizar los materiales de dominio público a fin de hacerlos accesibles
a todo el mundo. Los libros de dominio público son patrimonio de todos, nosotros somos sus humildes guardianes. No obstante, se trata de un
trabajo caro. Por este motivo, y para poder ofrecer este recurso, hemos tomado medidas para evitar que se produzca un abuso por parte de terceros
con fines comerciales, y hemos incluido restricciones técnicas sobre las solicitudes automatizadas.
Asimismo, le pedimos que:
+ Haga un uso exclusivamente no comercial de estos archivos Hemos diseñado la Búsqueda de libros de Google para el uso de particulares;
como tal, le pedimos que utilice estos archivos con fines personales, y no comerciales.
+ No envíe solicitudes automatizadas Por favor, no envíe solicitudes automatizadas de ningún tipo al sistema de Google. Si está llevando a
cabo una investigación sobre traducción automática, reconocimiento óptico de caracteres u otros campos para los que resulte útil disfrutar
de acceso a una gran cantidad de texto, por favor, envíenos un mensaje. Fomentamos el uso de materiales de dominio público con estos
propósitos y seguro que podremos ayudarle.
+ Conserve la atribución La filigrana de Google que verá en todos los archivos es fundamental para informar a los usuarios sobre este proyecto
y ayudarles a encontrar materiales adicionales en la Búsqueda de libros de Google. Por favor, no la elimine.
+ Manténgase siempre dentro de la legalidad Sea cual sea el uso que haga de estos materiales, recuerde que es responsable de asegurarse de
que todo lo que hace es legal. No dé por sentado que, por el hecho de que una obra se considere de dominio público para los usuarios de
los Estados Unidos, lo será también para los usuarios de otros países. La legislación sobre derechos de autor varía de un país a otro, y no
podemos facilitar información sobre si está permitido un uso específico de algún libro. Por favor, no suponga que la aparición de un libro en
nuestro programa significa que se puede utilizar de igual manera en todo el mundo. La responsabilidad ante la infracción de los derechos de
autor puede ser muy grave.
El objetivo de Google consiste en organizar información procedente de todo el mundo y hacerla accesible y útil de forma universal. El programa de
Búsqueda de libros de Google ayuda a los lectores a descubrir los libros de todo el mundo a la vez que ayuda a autores y editores a llegar a nuevas
audiencias. Podrá realizar búsquedas en el texto completo de este libro en la web, en la página http://books.google.com
‘ x j'eus
r I d 1:’.
f 0'
¡_.
_~’.¿.-',¿—' ,5 {x5
.
.. 1.4!. ul.
a .. . o .. -..___.-.5... iu:
w .°¡
. . l
. > u
1 . \
Ó
o
.
o
~ .. .
\ s . .
_
I
. 1 yx
. v t
. s . .Ñ
. 1 . 1I
. a
_ A
, I.
I
\ s. a .
.7
f
. o. _ . . \ .
_ y
ú . .
x . .1;
\ a I
. . .. G
0 N _
‘u l
. Ü u 1
r s
\
a
. l .
s N
N
. I
. - .
J
r
.
b
.
L \
v
/
I
a
. .
a. .
- .
,
. .
. o
a .
u. w
t
I
s
_
I I
o
v
n . s
. .
¡ , .
I ¢. .
o I
_
. a
/ . .
«I a
'
..
Ó
~ .
x .
‘a
’
_
.. . .
x
. _
4
4 ‘
_
. k . . u
.
a .
l Q .
n
o
- \
. . I
, I:
.
A
s
v
o \ n
. ’
Ü
a su
m
4. . .
. .
u
. .
NV o
. \
.
\
. “'
\ ‘
1
_
"o
’ o
.— \ ‘
\ \ _
q \ .
_
_ ___
i
. - .
‘
. r 1 \
\
1 \ Í
- Q
‘II
\
. I v
Q. ‘
J . x . \
| ‘s
. \ \
r ' ' f f. I
‘ .
,
d
, -
. .
. .
\ ll '
., .
\ I
\ . -
\
\
.
I a . s l i.. H ' 'f n- u , ¡v ' b r V ' ' “_d, _
n - - ' V, . "-7: »Fn "m: ‘(
' \ 5 A ' ‘ '- .,.'¿n y' ' _
“ c o s . ‘ ..J
_- .
' \ ,
. _
.A _ a
_ a -
¿n _~.
_ n
‘ Q t
. _ . _
w . l. p I \ 4
\ \ ¿ . „ Á æ ,/' Q t , n \
“ 1
. ,_ >- ‘
l ~ ^ “ .l c ° Á
, . ‘i .
I
, _ '
, . r i '
¡ " . n Í Þ
' - - . n_ 1 - . 1
t ' n ' s D 'n ' ' ‘ _
\ l “ \
l 1 . _ ‘ ¡
' O
\ F _ . q g n
r 'a — "'
| t , ' ' \ ‘
_ n .
fl _, _ _
O _ . ‘
\ Ín _ .
._ _ .
_ 4n . - s ’ V ¡ , on
~ “ - v æ O
I l _ 7 *
. ~ ' .. a ' I
n
.z .
n
_ ‘l. ' ' ' l » .
. ‘ n j _
n D _ A, a ; ‘
. i _
l
/ V
. r
' ' \ .
O
\
. -- _ - J _ a ' ¿
a - \ v‘
» ' - b \ w
. l
_ \ : ' n
x ~ " - ' l'
f i n ' ' .
_ -
' \ ' : Ï un‘ n h' Þ _ l . c I’
1 ‘ _ t a \ Á
¡\ a Í
O ~ ’ -Q ~ CO _ .
a ‘ - ' -
“ ‘
. ' . '
n Q _ . n
, 1 | -
w n , \ ¡. n
n l b ‘
l t ' a . _
Ý s _ _ I fl‘
b I
. A _ _
' Q
p I n ~ ‘
, .
," n \
f n n
.- . \ -' _
\
n.._»-_-___.__~_L ii_ i_ Í ‘ " ,_
A ' r í ' q n I» y
v . ' _ .r |
n n pI . ' I ' ‘ '
- l _
r .
l
n» ‘ . O ” _ " \
. _ Q W
. J
n * i ’
_
\
4
l ‘
l j ,~ ‘
- Í
Q . . \ n Í d,
- 2 ' ¿‘ . - . I,
\ ‘
n ' ' I ü. O. ' ‘
n ' . ' r ‘
a \ _ 1 l '
Á r D \\ Á ' Í
' J n r ] a
- x ‘V
D a ~
'“ A . -
. ' ,
n
- Í ,
_ I y, N
Í l
_ \ ' - w1 a.
' - d
n_ ‘
. ' I I g \‘
\ . \ r _ Í
n
„ I ‘ l r' _ n
_ .
- a a ' ¡ . ' a _
- ’ ~ l Í \ “ s
\ ‘l
a _ ' f
' “ _ . A
r uI n
I ' - ‘ A. o.
\ s
' n ° g \ 'x
- . x o
’ \ . _ \ _ i 0
_s
... . . - x . - n
¡ - l _ I
' O I . ,
1 ' ~ ‘ ,
Í ' L! . I .
i . , ¡I
n , _ Á
I » Á
Í z g '
l j fl \
' s o x
I - v ..-’ ~ ' - ' '
' u-f ‘ ' '
Í _ ' n--v- ‘
.Í
I . ‘
|
. O
ïiïrïam?" "’-"""*'1"-r" ‘ '* " - . gw-‘Ïï-w —w‘<‘" -— w’ °
y
í
IÜEFENSA l.
~
' DE LA ‘TRADIc:I~O~N,
YDE LOS SANTOS PADREÉS,‘
w’ POR . j
EL ILUSTRISIMO Snñon BENIGNO BOSUET,
~. Obirpo de Meaux.
FIELMENTE TRADUCIDO
del Francés al Español.
TOMO PRIMERO.
CON PRIVILEGIO.
\ . o . v‘ .
g J, .1 ¡j I 9| ‘ \ "1 . ’
f‘ ‘ñ- v‘ \ .. o x ‘¡u , co. .¡ .. 4. ‘ ‘u- l A‘,
‘V.
_.-4_ ‘l ¡fi
‘ é Á1 ‘I g \ K.n :0
¿J í — \‘iX\,"
n "w n’ “s ~
t) y’t’: ï Wy I r
1‘ l‘, ' .'
v.
r‘ "z q
I‘. ' I
t V n \ I \ \
Q ¡d 44.’ s
‘0-..i, "lo ,1 .' 1- o. ‘h -I ' .1. Uu Á,
l \
b .
w- ‘ v’ '.: ‘¡(9!
"u! Q‘ ‘V n’ . _ ‘.‘
"’ fi a: —
“u. ~
. .-. , ,4-
.
_.\. . ‘
">1
" n ‘L I y ‘l
li ‘ 1 l Ñ ï: 2"‘ ‘i'm
I ~ '. Í D
0'.‘
“ n 4 ' u.‘ '
‘f h (T I’
i c u n ~ y
7' .0 'p>~n¢ o ' '" V‘ ‘ “i l",' a‘, ".
t “\"' a!\\l\L ¡‘STI -:! "' '. ‘í _’\,| ;;§,,~',, Q \.¿.¿: .. A ‘a
(ñ
_
—~\q- o \ ~ '\
‘u \ \\4- !\I¢..A4l> Q .
.*
* \'
m x ‘
"‘-“ S“ ‘W '“- 5' > "‘~“--‘-‘~ - -'1‘ '~ r d; cu) \'s=\.'.ü¡:. m
\ o \\"
,
av ' '
n.»
' k I o L
~ ' .
" \ ‘r. "
w -... ‘
A. ‘-.$ms\S\ L‘. akma. ,‘msh 1‘: '- J.
-*:\''\'&‘\‘§_--_“ a.1%’; 4 a r.
DELZLO? CAPIï1:II“L<2s~ ‘CQNIENIDPÉ
w,» wx-AJI. J. marine“ este Tomov .»:_:‘:\.c'.'.'s\0i3
-. . ‘ ¿,1 ;x Í‘ f r5, ¡N ',4» ‘t ¡r “c; 35.-". .. -.'.,'..;\;"..
' PRefacio del Autor , donde se declargelrdesigflitgg, y
mdizazsian ;de..ex4añr¿; Eagyxri}: ¿,1 :, «a0 1.a: e 21.‘:
ï? “V. e S.'\..«,' ~‘.\_ ¡n23 5.": "‘.‘—.'\‘)'J ‘\'.".':‘;:T*.'\.\‘.':‘F‘ :mí\ “ü
- t 114.13.11 0 ? mzlmmku igor ¿ ¿“Í
‘ _ _ Ap, 1, Lg,Tnqdi¿ibr'zÁ.Íifr’zzjrégziadá Éïuiámezzïe, eii .14
persona de Sanlzlgzgstírg
4 , p. .7... _ .2’. "
€39,11. ¡Quiz M. Simnrsecwtdezïa á. n’ mismo , ‘cazfesqndp
yaa-coda-eloccidenze. Iza, seguida ¿Sd/lxiígustin, á quien
¿deu-m de Novaciorg; ps»9.- \ . I, ' ‘ ' ..
Gap, ILI-rlííwzorxïrzsde ladaóïrim de. . yídlllxígúitïn ‘de. sigla
mm-jiggargozzfigada poiyM. ‘Simat, ydzpasa, ¡»me este
4414506
Gap; LV."-mfiablardekïm
Autqridad-dq 1aGreggnïa ¿Pauzifl- _Si’:
Jgtefig , Oapidencal.‘ . une? lícito
¿»fi Simca-apelar áJdïIg/esia Oriental. Juliana el ¿Pe
Iegiaaq canuancido‘por ¿en Agustín. m: ¿emeL/‘qnte- pro
za-xy-‘¿zïimienao «p-zxsn - -' — o l? vï 4:23
(lap, Vw Idea...x1qsflI-.Sim0n sacaran 744.1547.1gulgmtin: ctm
.. "tmguierzprpcede ,‘ cama contra zm. Novador en laaEé,
-¿— ¡agua lasregla! d; Fïcenteríe Lerins: todo el Occidente
se intcremuertestr; ;¡—'eï!—‘1ll_'4va:P-.I6- ‘ ‘ .- < .
Cap. VI. Que esta acusacion, ¿ig-M Sím0zzg¡retac‘:oáre la
3 “Santa Sede ‘, ¡qbrsqrodo zloctidentle, sobre toda la ¡giga
— sia , y arruínarla uniformidad de‘ m: sentimiento: , y de
._ su Tradicion solzrg- la Fe’ que em acrílico renueva»; la;
«. - queszionqx,ekaílqzngngggdecídidaïa,po; las‘ Padres. coll el
.. _ ¡h ' 52 c011
y.,
b—g'/
—_l*m_‘—_ — _fln
,_._ _..——
Cap. IV. Tre‘: irziquos preteïtofdel Critico‘para encubrir
este exceso , p. 12.2.
Cap. V. Desvelo de M Simon en dar a conocer, y reco
mendar a Bernardino Ochí/z , Fausto Socino , y Cre
. lio,p.124. 15'. . - ‘ s
Cap. VI. M. Simon impugna con debilidad áSocino:
exemplo sobre estas palabras de Jesu-Clzristo : An
tes‘ que fuese Abraham , Yo soy. Joan. 8. ‘v. ,58.‘
, p. 129. ' , __ - s, s . y 4.:‘. un ,
Cap. VII. M Simon se maravilla vanamentexde losfpro
Q -gresos de la Secta Sociniana , p: 131 . ’ . Í)
Cap. VIII. Disculpa vana de M. Simon , quien dice no
escribe sino para los sabios : quales son los- sabios para
quienes escribe, p. 132. - _
Cap. IX. Recomendacionde las interpretaciones del Soci
niano Crelio , p. 1 33. ' ‘
Cap. X. El Critico se preocupa de las opiniones ¡de los 5o
cinianos , y las justifica por sus respuestas , p. 136. .3
Cap. XI. Floxedad afeóiada de M Simon contra‘ la blas- ‘
femia del Sociniano Eniedin : cita siempre la -Tradicion .
para debilitar la Escritura , p. 138. k
Cap. XII. Sumo estudio en referir lo ridículo de clzoga
‘Sociniano acerca del infierno , p. 139. '
Cap. XIlI. El metodo de nuestro Autor en referir las
blasfemias de los Hereges es contrario a la Escritura,
> y a la práéiica delos Santos, p. 141. ,
Cap. XIV. Todo el caracler del libro de M. Simon inspi
ra Iibertinage , y desprecio de la’ Theologia ,14 quepro
cura siempre oponer ci la singolicidad de. la Escritura,
p. 142. * .' . ,‘*
Cap. XV. Prosigue-M Simon despreci-ando la Theologia:
. la de San Agustín ¡y ¿de las Padres contra Idialrria
. g Tom. Í. gg rw:
» nos ultrajada: Pretendienzio explicar mejor la Escritu
ra que los Padres , arruina losfundamentos de la Fe’, y
_- favorece
Cap. XVI. elQue
Arrianismo , p. 144.. la Sovciniana son las' »
las interpretacionesa
que auto “iza lll. Simon , y las que vitupera como tlzeo
,-—logicas son en las gue {se encuentra la Fé de la Trinidad,
—.p.15I. 7 .
Cap. XVH. Santo Thomas, la T/zeologia Escolastica , y
Izaxo este nombre la de
v'-.‘Simoiz;,p.'ïxg4. . los Padres
- '— despreciada
J 10r -‘
Cap. XVIII. Historieta delDoáíor Espensa ponderada
M maliciosamentepor el Autor spara reprelzender a Roma,
t. ,.y._despreciar de nuevo la T/zeologia , como induóliva á
error , p. I 57- _» .
Gap’. XIX. Prosigue el Auéor hablando de Erasmo en des
preciar la T/zeologia , como si ¡tuviera violentado el es-v
piritn de la Religion , p. ‘I 59. _ '
Cap. XX: Atrevida critica de Erasmo sobre San Agustín
- . sostenidapor M Simon : prosigue el desprecio de Santa
2'; ' mama’; por este Critico zpresuncionque como a Erasmo
le inspiran las letras Jiumanas ; ignora radicalmente que
es1a.-Esc0lastica,y la vitupera, siendo incapaz de co
nocer su utilidad , p. 163.‘ Ï ‘ '
Cap; XXL Alabanza: excesivas de Gracia ., no olzstante
g guefavohece los Arrianos, los Socinianos , y una iryïni
dad de otros errores , p. 16 5.
Cap. XXII. ¿El Autor entra en las opiniones de Socina,
---';"¡Episcapioigucrocïolpara‘ ‘dniquilar- la prueba de la
gxufleligiou por Jáslïrofeciassgps-I 68-. '
Cap. XXIII. Se demuestra contra‘ Gracia , Simon,
2:5, gueÏlïesuïCfiristoffy ‘Íofiyïposzolesïse walieron de las
üïrxProfekias‘;wmozzgnelzaflcófivïncéfltes‘ a; las zgue ‘ nada
um p, . 5» ‘te
* ‘teniahque‘rtyzlica/rlosuíudíos, p. “x73. ' '- g ' "'
Cap. XXIV. Se prueban?! mismo asunto - por los Padres;
o tresprincipiospara descubrir la ,. Tradition zpri/nera‘ las
apologias de la Religion Cfzristiana , p. 17;, . ‘ ‘
Cap. XXV. Segunda.,.y<tercer principio de brTradicion,
3 de laïpruebez de leis:Pz'zfeciasl>en"las'pmfisiones de ‘zFé,
'. y en la demostrïzcíwtde («autenticidad‘de -'lo.¿"libros‘.de[
viejo Testamento , p. 177,1 _ x » " t 1
Cap’. XXVI. LorMarcianistas-Ítan sido losprincipalesart}
toresde la doélkriuade Epïfropiovgysde Gracia —,ïga¿ de
Q . ducian la cazzzziccionrdelzzr-Féfctzt flesú-íllzristoïra‘ slosxniila
.5 ’ gros solos , ‘excluyendo la: Profecías. Notable pasage ¿le
Tertuliano 5 p: 1.79» ' ' '
Capo XXVII. Si-¡aprueba de la’fuerza de las Profecías
dependepríncipafnzente de lasexplicaeiones de ‘ los ¿Ra
vbinosrycomoxirzsinzsiaelvfi Simpnnflaxage admirable de
San Justino , p. 1 8 I.
GapXXVIILïProdigiosa oposicion de‘ la docïrina de Epis
' copio, de Gracia, y Simat: corz-laxde los Clzr-istianos,
'° 17-182. +m '* ¿J ' » '.- '.\“--- vara. .
Cap. XXIX. Prosigue la Tradition" de 'la fu’ zade las
' Profecías xonclusion de este examen , descubriendo sie
te artículos en M Simorz , donde arruina enteramente la
-‘Tradici0n,'P:.1—83. . - r ‘« ' w xr. n « ‘.2, z L‘
Cap. XXXycorxclusion de, este. libro por un consejo: de "San
Justino ¿los Babinos, p. 18;. ' ' - "
SEGUNDA«PARTE
Errores sobre la m ateria del pecado Óiiáinal‘, y-ide
la Gracia.
J .
_LIBRO QUINTO
M. Simon Seétarío de los‘ enemigos’ de la Gracia y”
- o
enemigo de San Agustín : autoridad de este
Padre.
/
res maniflestos , es tambien un Autor de muy pocafuer
za‘ en otras notassuyas sobre San Pablo , p. 252.
Cap. VII. Que nuestro Critico procura dar a la docirizza
de Pelagio un cierto ayre de antíguedad : que hace decir
' ' ¿’San ‘Agustín , que Dios es causa del pecado : que le
' pospone a Pelagio , y que siempre disculpa a este Here
» ‘siarca, p. 254.. '
Cap. VIII. Que oponerse ¿San Agustín sobre la materia
‘3’ de la Gracia, como lzace M Simon, es oponerse a la
Iglesia , y que el Padre Garnier-demuestra bien esta ner
dad, p. 258. ' -
‘ap. IX. Que desde queprincipió la lzeregia de Pelagío,
toda la- Iglesia bolvió los ojos a San‘ Agustín , quefue en:
cargado de denunciar a los nuevos Hereges en un Sermon
de Cartago sufutura condenacion; y que’ lexos de ino
b - var- nada , como le acusa el Autor , el fundamento que
luego estableciófue la antigua , p. 26o. e‘
Gap.- X. Diezevidentes demostraciones; que San Agustín
lexos de pasar- en su tiempo por —Nouador, fue conside
rado por toda la Iglesia como el defensor de la antigua,
- y verdadera doctrina: las seis primeras demostraciones,
p. 262. r _ *
Cap. XI. 7. 8. y 9. demostracion. San Agustín escribe de
orden de los Papas contra los Pelagianos; [es envía sus
P
libros , les somete a la correccion de la Sil/a Apostolicd,
y esta-los aprueba , p. 264. .
’Cap.-X—Il. Decima demosrracion ,y muchas pruebas cons
tantes 5 que el Oriente no veneraba menos la doctrina de
- San Agustín contra Pelagio , que el Occidente. Hechos
dela Congregacion de los Presbyteros de Jerusalén .- San
Agustín atiende alOriente , como al Occidente: por que’
fue conoidado en particular alConcilio general de Efe
- 1:0, p.265. y ' Cap.
Cap. XIII. Quán necesaria era la pcnetracion de S. Agus
tin en esta causa. Maravillosa autoridad de este Santo.
Testimonios de. San Próspero , de Hilario , y de Arnobio
el Joven , p. 269.
Cap. XIV. Se exponen tres disputasformadas en la Igle
sia sobre la materia de la Gracia , ‘yen todas la decision
, de la Iglesia a favor de la doclrina de S. Agustin. Pri
_ mera contestador: ante el Papa San Celestino , dond¿
_ se determinó que San Agustín es el defensor de 1a docTrí
na antigua , p, 27 I .
Cap. XV. Quatro razones demostrativas ,que apoyan el
juicio de San Celestino , p. 274.. .
Cap. XVI. Segunda contestacion sobre la materia de y
Gracia , suscitada por Fausto de Ríez , y segunda deci
sion en favor de San Agustín por guarro Papas. Re
flexiones sobre el Decreto de San Hormisdas, p. 2.77.
Cap. XVII. Quatro Concilios que pronunciaron ¿z favor de
Y - la doctrina de San Agustín : reflercnse los tres primeros,
yseñaladamente el de Orange , p. 278.
Cap. XVIII. Ocho circunstancias dela historia del Con
cilio de Orange , que manifiestan que San Agustín era
considerado por los Papas , y por toda -la Iglesia como
el defensor de la.Fe’ antigua. Quarto _Concilio en con
firmocion de la doctrina de este Padre , p. 279.
Cap. XIX. Tercera contestacion sobre la materia de la
Gracia , con ocasion de la disputa sobre Gotescalco, don
_ , de los dos partidos igualmente se referían en toda la ques
tion c‘: la autoridad de San Agustín , p. 282.
Cap. XX. Quarta contestacion sobre-la materia de la Gra
cia , con la ocasion de Lutero y Calvino , que se propa
saban de la doctrina de San Agustín : el Concilio de
Trento resuelve la dificultadpor las propios terminas de
_ este Padre , p. 284., — Cap.
CápL-XXÏ; ‘La. autoridad de :3. Agciïiin,‘ y S. uPráspem sn
discípulo enteramente estabíecida: quan reverenciada la
autoridad deS. Fulgencio : este Padre mirado como un
segundo Agustina , p. 285,, c; , v . . Í . ,
Cap. XXlljTradiéiouïrwrstante de todo el Occidente enfa
vor de S. ’Agustin,_dc' su autoridady doélrina; El Afri—
ca , la España , las-Galias , S. Cesario enparticular, la
Iglesia de Leon, otros Doólores dela Iglesia Galicana,
. la Alemania , Haymony Ruperto, lalnglaterra , ‘el-IC
'.Cap; XXIII.Italiay
Beda-Ja Sifxdespues de todo‘:
Roma,p; estos*testimonios
2,87; .. l. _.‘.' se debe
Q permitirponer aSudgustin entre los 'Novadores , que es
'. t lo mismo casi que numerarle entre los Hereges: lo que lzof
roriza a Facundo, y a toda 1a Iglesia , p. 29.
Cap'.XXIV.Testimonios de los Ordenesrlleligiosos: del de S.
" Benito, de Santo Domingo , de Santo Thomas , de San
Francisco yScoto;-Santo Thomas recomendado por los
y Papas, por lzaver seguido a.S.Agustin:- concurso de tozü
la Escuela: el Maestro de las Sentencias, 13.3291. -._ y
DÉ
,-" ' ' ' ‘_ ' Pag;
DEFENSA DE LÁ TRADICIÓN,
" ' i?‘ DE LOS SANTOS PADRES.
Í’ Í, P EF ACI O" í"DE L , A U T O R.‘
2 Defensa de la Tradicion,
les pedirá Dios cuenta- dela sangre de sus hermanes¡
que cayeron en el errór por no haver sido‘ amones
tados, -‘ ' '.-' ' _ _
‘ No ha mucho tiempo vino de Holanda un libro
intimlado: Historia Critica de los Principales Comenta
dores del nueuoIestamento , desde el principio del Chris
tianismo hasta nuestro tiempo “¿I'm Por Sjmon Sa
cerdote. 33s uno de 10's libros , que no pudiendo hallar
quien le aprobase en‘ la Iglesia Cathoiica‘, y por con
l
siguiente ni ‘permision para imprirnirse entre noso
tros , solo pueden darseal público entre los enemigos O
de la Fé , ,y en un país donde todo se permites-No u
obstante la solicitud ‘y. vigilanciaidel Magistrado,
penetran insensiblemente estos libros , y se esparcen
comunicandose los ‘unos a otros , siendo el principal
motivo ..paca leerlos, que sean con. solicitud busca
dos, raros , y curiosos; en uná palabra , que estén
prohibidos, y contengan una doctrina que nadie quie
reaprobar; es» una apariencia de capacidad y de sa
biduría apartarse de. lostsentiihientós comunes, y los’
gue’ noadvierten: que ‘hay una libertad perjudicial,
alaban- los ‘Autóies de estos libros como gentes libres,
y desengañadas de los perjuicios comunes.
'\ - ‘A todas estas qualidades añade el Autor del li
bro-de. que hablamos, sia de ser critico, esto es , que
examina los terminostpof.‘lasnfeglas de Gramatica,
¡creyendo poderrasi engañariallMimdo , y decidir so
bre la Fé , y Theologíar, ‘por el Griego , ó por el zHe
breo , de que se‘ gloria. "Sin disputarle aquí la ventaja
gue quiere sacar de estas iengnias , .y :sin abrazar elïpar
tido de los que le exceden en ellas, y niegan que‘.M.;
Simon haya hecho tantos progresos como"se_ inuagina,
r _ fl: . J s . , me
_ ' de los Santos Padres. _ _ 3
me contentaré _hacerle ver en la prosecucion de esta
Obra , que es en un todo novício en la Theología , y
que no solo hablaron mucha osadía , sino que habla
mal, por no decir mas , sobre materias que no al
canza.
Para entrar en esta díscusion , es necesario antes
dar en general una idéa de su obra , pero esto es im
posibles; Si bastára referirse al titulo , se creería que;
prometiendo dar la Historia de los principales Coe
mentadores del nuevo Testamento , havria querido
Q hacernos conocer solamente el genio de ellos , su sabi
duría , su modo de. escribir , la manera de interpretar,
el tiempo , laocasion de sus obras , y otras cosas se—
mejantes , sin entrar enlas-questiones ., o resolver so-ï
bre ellas , por ser una obra inmensa , á que no basta
rian muchos crecídos volumenes- Pero no. es este el .
designio del Autor. Con elfipretexto de s querer dar al.
parecer unaanalysis tal qual de ciertos lugares , quie—
re dar su diétamen sobre el fondo de las explicaciones;
alabar , corregir, reprehender segun su voluntad , así
ávlosSantos Padres, oomoá los demás; decidir, dei
las qnestiones, no de todas á laxverdhd ,. porque -se-:
ríe una empresa interminable , sino de aquellas que ha
querido elegirg, y especialmente donde ‘halla ocasion
de ínsinuar las opiniones de los. Socinianos , tanto cone
tra laDivinidad de Jesu-Christo, como sobre la mag;
terio ide: Gracia y .‘o «comparando; los Griegos’ cda. 105;;
Latinos,‘ y los Padres mas antiguos conlos ‘que ¿lesa su— _
cedieron’ , sentenciaconuna autoridad , que segura
z e N9no.le
mente se alcanze porqué: le sugerida
conviene. -_ _ entrar:
' enxestas
—
r questiopcs; ¡{Orque ,51 la verdadwno, es. posible que las,»
lo.
, \ . g
4. Defensa de la Traclícion,
ilustre tanto como es menester en un volumen como
el suyo : Ponlo que suscitando una infinidad de difi
cultades ,'que"no puede , ‘ni quierevdecidir; solo es
a proposito para hacer nacer dudas sobre la Reiigion;
y es un nuevo encanto para los Libertinos, queaman
dudar siempre lo‘ que les condena. No se puede tam
pocodar alguna razon de la eleccion que ha hecho «
de Autores , de quienes; ha "compuesto su tal qual
compilación. Si se quisiera redúcír segurrsn Itituloïa
tratar de los Comentadores del nuevo Testamento,
nada le obligaba a hablar de San Athanasío‘ , de ‘San
Gregorio de Nazianzo , y de otros que ñohan hecho
Comentarios, ni delos Escritos Polémicos de estos
Padres , o de los de San Agustín. Si ‘baxo el nombre
de Comentadores quiere comprehender todos los Au
. tores que han escritosobre el nuevo Testamento , es
decir todos los Autores Eclesiasticos , no se sabe por
que olvida un San Anselmo, un Hugo de 531/7301‘, ‘un
San Bernardo , y sobre todo un San Gregorio el Grande:
y mucho mas quando los dos ultimos , además de ha
ver tratado como los otros ladcürina del Evangelio,
y en particular‘ las materias; sobrelas quales MpSi
mon ha Iemprendido darnos reglas ,ï han compuesto.
expresamente Iïomilias-‘sobre los‘ Evangelios; fuera=
de que merecian sinduda hombrarsetanto comoSera
veto; y Bernardino 0am, de’ qnienesmos dá nxïaexaca!
ttvánaalysís ‘¿z aunque -’ no refiera‘. algunzcomentatio. ‘de r
ellds; eïdecíryque con eliiombre de Comerítadoreslïaï
blérïde quien esïsu-voinntad gay baxoel tituloxdesir
historia trata las questiones qucntenia en su capricho:
En una ‘palabra’; qisetdicelo que quiere; sin que se
pueda reducir ¿su libro’ » fa; un asunto; regular‘; y Ïsi yo»
Z ' .". qui
de los SantosyPadrese 9
quisiera expresar naturalmente lo que resulta de él,
diría que enseña con toda perfeccion las exposiciones
de los Socinianos, los libros donde puedeinstruirse
de su doctrina , el buen sentido y habilidad de estos
curiosos Comentadores , así como de Pelagio ,, Gefe
de la secta de los Pelagianos, y de todos los otros
Autores, o Hereges , o Sospechosos; y que princi
palmente enseña a debilitar la Fé de los mas altos
Mysteríos con los defectos de los Padres (a saber los
. _ que M. Simon les imputa) y en particular 10s de
San Agustín , especialmente sobre las materias de la
."Graci¿a , cuyo verdadero sistéma nos descubre nuestro
Autor, y— hace ver a San Agustín lo que debía decir
para confundir los Pelagianos; de suerte, si Dios lo
permite , que yá no seria este doíiïo Padre , sino M.
- Simon , quien será el vencedor : en una palabra , lo
que ‘enseña con toda perfeccion es ‘a estima? 1os.Here
ges ,= y a vituperar los Santos Padres , sin exceptuar
un_o , ni aun aquellos ‘que finge querer alabar. ved
aquí despues debaver leído, y reléidq su libro ,10
que dexa en el entendimiento ,'y el fruto que se puee '
de recoger de su trabajo. _
Si esto pareciere increíble por ser una locura,
protesto sin embargo delante de Dios , que nada exa
gero. Todo se verá en cl discurso de esta Obra ; y pa
ra proceder con la mayor claridad en este examen,
me propongo hacer dos cosas : la primera , hacer pa
tentes los manifiestos errores de nuestro Autor’ sobre
las materias de la Tradicion y de la Iglesia ; y lo que se
dirige al mismo fin , como es el menosprecio ácia los
Padres con los medios indirectos , por los quales de
bilítando la Fé.de la Trinidad , y de la Encarnacion,
' .,. — pro
. - .—
—--- ¡'
-1.r"_"'"s' - . ¡n a. u,» .-
v——
Q.
‘¡J
t a FO ¡r
I ' I f
a
un’ ..
r ’ ' '
f '.
'
- q Y O i \
r E.‘ g ._¡ __ i _
I.‘ . f ' ¿
‘ " r ‘ ¡j o A.
l’ .
s . ' I’
( 1C Ü han OLU) \ { ¡ _ - v !(.}:_¿¿ ¿.¿‘¡_
- U l’?
aeaanaaaaaaaaeaaaaaaaaaaan
"PRIMERA PARTE. '
En que se descubren los errores ezpresosgobre la
Tradition , y sobre la Iglesia : el menosprecio de
los Padres, debilitando la Fe’ de la Trinidad y de la
Encarnación , y juntamente la inclinacion ácia
los enemigos de estos Mysterios’. ' '
\
0 *
CÁPITÚLÓI. ~ ïg
. fiïjLa Zïadicion inzpugnada claramente en la Persona de
‘y _ _ - ' San Agustín.
z ARA principiar por donde él mismo empieza,
-, estoes por San Agustín , le impugna sin disimu
rlo Y,’ y‘ sin medida desde las primeras palabras de 'su Pre
wfacio , y le acomete sobre la materia en que mas se
aventajó, qual es lazde la Gracia: lo que adviert0.aqui,
_.no con el designio ¿de ‘comenzar por. esta materia;
que reservo para el fin-zde esta Obra, .síno solamente
“para mostrar ¡en ‘el proceder del Autor un desprecio
patente de lar-Tradicion ',7que aparenta querer defen
der. Digo pues ante todas cosas , que M. Simon no
teme acusar a San Agustín-sobre «tstarmateria: De
ser Autor ‘de un
Comentadores nuevo sistema
antiguos; ; de lzaverse
y— de ‘haver inventadoapartado de los ' u
explicaciones
I “A \dg
.77
8 Defensa de laTradícion,
de que jamas se.- ‘havia oído hablar. (a) . ' . - Ï- i"
Ved aquí como trata á quien llama al mismo tiem
po el Doítor del Occidente; y ‘parece le ensalza solo
-para tener mayor gloria en abatirle. «Su ignorancia ‘es
suma, así’ como su temeridad. Si huviera leído sola—
mente Ïcon una mediana atencion los libros ¿de este
Santo Doctor , le‘ veriasiennpre inseparable de la ‘doc
trinarque havia hallado fundada , y establecida en to
da la Iglesia , como‘ lo dice él. mismo- No hay parte
alguna de su sistema , yá que á nuestro Autor agrada
hablar así , qüeïeste’ grande hombre no apoye sobre v.
el testimonio de los Padres sus.predecesores_, yíw
Griegos , yá Latinos , donde no les siga] por decirlo
asi , paso á paso ; y que no halle con la mayor soli- '
déz , y fundamento establecidaen los Sacramentos de
la Iglesia , y entodas las oraciones de‘ su Sacrificio.
_ No obstante ‘M. Simon le acusa de seÉun Nova
dor. Esto dice en su_Prefaci_o , y lodefiende en todo
su libro, donde-á la verdad solo tiene por blancoit
¿San Agustín. Repite Zen todas las páginaslas novedadés
de este Padre , susl opiniones particulares ,22 las quales
acomoda elTexto sagrado; Solo piensa hacerle Autor de
sentencias las mas odiosas , como las de Luthero , y
Calvino.» Afeéta decir repetidamente , que estos im.
pics que: hácen á Dios causa del pecado , y Wiclef,
que..es' el Autor de esta blasfemia , miraban á ‘San
Agustín’ como asu Maestro , sin mostrarles que se
engañan;- nie decirlo una sola vez , de suerte que po‘
KdemOStdéCll", que todasu obra ‘está escrita derecha
mentdcontrzreste Santo,‘ 23-4 - ” . - 1 '— '
,.‘- z- .">\—.-\' zs
¿i¿_á(¡a)1"r‘ef. i
z '*-r-
17.? . Ï’ ..u?‘In.- .1’.
ciíeïlosSanetos Padres.
CAPITULO . II. '
u z s -
Que -M. Sinzon se condena asimismo , confesando que todo
‘nf-s cl Occidente 71a seguido-a San Agustín, a quien acusa -'I
de NovadorpÜ Á — w- JJ
2- 2 / que .
514 Dfiizsa ¿le la Tradición,‘ ,
‘que eran losldosgrandes Maestrds delos -Tke°o\log'osjde ‘sit
ezfianzpoaésasnace madre‘ isïenïrpolque/esto:es así: Porqué
después de haver’üisto eifrl petzaïeste profundo respeto
por la dofflrñaa ‘cleSan Agustihïlesdeel tiempo t de es»
te Padre ,‘ estamos en un’ sigloflonde vivía? Nicolás de
¿Lira i‘, este dóüóïR/eligitïsbeimneiscahb ¡”es decir có
‘fxio’ ÓbserVaVnuestroAutóïïálïprincqyio delsigllo cator;
ce."(b)Aun en el tiempo de‘ Eiasmo no se le podía per
elonar el menosprecio que hacia de San ¿Agustín ; to
dos los-Theolcifgos- traían entre manos a San Agustín,
¡y aun-al pïesentées ei oraculo de? todos altos ,— sin que
ias eensuiasïdéïlü. Simonlle puedan hace-r: perder esta
“‘ u} f‘. ‘u. ., s a ul". L.) .. "' ‘ AI “D
‘ -. v .- " GA Pm UL o 1V, ‘A . .
‘Autoridad de ‘litlgleiiaïüccidental. Si ei‘ licitoïaMïï 95
--“Jnzoti'apelar’c‘z' te Iglesias Griénfalflcïulídno ‘cite-zeta: ‘i
.a.«xz¿eixg«iayzo cvnziencïlzgpflrgsanïiagusanen semefi-¿‘f ‘-_ 3“
«TM ‘ —- .- * ¡’ante proiedirïíienfio. -‘ ' ' ' —— l‘?
uÏ ‘in!’ 1i¡"'(.i.,'. r}, . .1
9- f <- Qntra
‘¿ordena
__i_1nanos
tanllarfizüMbsimonr a n:igiesiaflrieni
grahclealutbridaciïï-Lgle"todo el
tar‘ como tous ‘iluminada; y jsábia ¿yeste- las nos que
niego. PeÏoÏsin cómparartaquilassdos‘Iglefiasïïii ‘si?!
querer contradecir a ‘nuestros Criticos,que'se imaginan
piareceímassabios alabaiïdora los Griegos, responderé
sinm- lo quersurágustinsespond; a-Jüliano‘,
quiera ciarmdélïmïinoraba-‘lá
cirlental‘ » autoridad de
i: K» creo’ que Testáflpaíiteïdel- «lalglesia 05:?
mundoüionde qui
so- Dios coronar deíun gloriosisimo martïyrio- al primero d!
* sus
(a5 Pag. 477. (b) Ibid.
¿y -¿íe\?los«5‘an1o3Badíteáï; {,5
su‘: ¿postales OirdflbíflzsfetrtifflíïflíifiáE) no? donde esta‘:
blecíó en el Occidente el Principado de la Cátlredra
Apostolica , como lo explica él‘ mismo en tantos lu
gares: ¿qué responderá M. Simon a una tan grande au
toridad 'c0mo la de la Iglesia Occidental; quetigne g
la Iglesia Romana porsu Cabeza’, Mad-re , y.,\Seí1_ora
de todas las Iglesias‘? ¿Se puede negar, que‘ debe ser
suficiente esta parte del mundo a M. Simon , tambien
como a ]uliano,y tanto mas,quanto finalmente toda la
Ïgles-ia-Catholicayfirat
el Occidente i‘ Así y la-venido despues eOccidente
auïtoridadbdel contenerseatan
en
f6 ¡ »
B42125222 ele la‘ Tradicíofi,
o l ‘ o o ' o ‘ _
tin ‘a Juliano ," decimos tambren nosotrosá M. Si‘
mon. ig”? _ _ 2"‘) I‘; ¡"v _ ff
-
\--'-' ' " 11*’; ¿»vs CAPITULO v; .- n15.
m" Ú t Í rfioío-zag; .1 :': ' :
Ïu. q: .- 5a.. ‘ ;g‘ ,',. ' ‘ ‘ y b _S
(a) Pag, 77. V ' " ‘ \‘ j -I HÏ .1- Jïsr? ¿L7, ÜJÏÏI o’)
"w" "h >- Tw——- n‘.
- a: ÏcnpzrrurLo ‘VI.
“vu tía fc‘
y Que‘ esta acusacibn deM recaersob/fe laSanta Sede,
sobre todo el‘ Occidente‘, sobre‘ toda la Iglesia, y arruina ‘la
unïormidad ¿de rsus. sentimientos‘, y de su Tradition sobre la
Fé Lque ‘esteï Critico renueva ‘las questiones exactamente
‘Üdecididasrpor losPadres con‘. ‘el ‘consentimiento de‘ toda '
s} ..'v'ï"la ‘Iglesia ‘Cds-bolita: cescimoniordel Cardenal ‘r ;;
‘Y’ “‘“ ' ' ‘ti’ “i IÏ ¿ - Belarmíno. v e “.5 9r
- - ' " .' '
..\.. .¿'-.—..- -,:
Ise permiten tales excesos , claiamente se vea
‘ ‘ ‘qué extremo seceducerlakeligion,‘ La idéa que
nos‘ dá‘ Simon-‘clesellaï es , que no solamente’ él
Oriente ,7y el» Occidente’: no están deacuerdoien la
Fé, sino también que uníNovador arrastró tras de si
todo el Occidente. ti que: se ,varió en la antigua Fé;
que ho hay‘ de consiguiente Tradicion constante , por
que‘ la que havia hasta San Agustín cesó ‘despues de ‘él;
JS} .04. avg“; C .« _ u‘:
2:0 Deifeñlsaqde laïrdïíirsion,
y havíéndosc mantenido. solamente ¿los Griegos enla
‘doctrina de susÁPadres , ‘CSMPICGÍSO buscar -la,Fé , y sa:
,na doctrina en el Oriente; ' Ï z
,_ Se vé pues con evidencia, _que no solamente se
-trata de San Agustín ¡ordeno doctrina, sino tambïen
de la autoridad ¡y doctrina dela Iglesia ; ,pOÏq\lÜ'Sj.’5e
permitió a San Agustín mudaila en una: materia carpi
-tal , y no obstante que la variaba , le’ aplaudianïlqs
Papas , ytodo el Occidente , no hay yemas autori
dad, ni doctrina. fixa z es necesariotoieñar los erran
-tes, y abrirla puerta de la Iglesia i todoslos Nova:
‘dores. Porquemes mehesterïobservar= con diligencíá
que las questiones , en las quales quiere comparar M.
Simon a San Agustín con los antiguos , no son ques
tiones de poco. momento ¡,1 o indiferentes , sino ques
tiones de Fé donde se trataba del libre alvedrio; a sa
ber’: si era- necesario defendérlecon Orígenes“ contrg y
las heregias de los Gnosticos: si era violentado oforza
do, ¿traído solamente por persuasion ; si Dios permite
solamente el mal, o si es el Autor de él , o en ‘otros
terminos ; si quando entrega ‘a los hombres-a sus Íde
seos , es causa en alguna manera delabandonoi-de ellos, o
de la ceguera de su voluntad ;',sl pecó Judas ¿’n su tray
cion , ó si no hizo mas gue cunzplir lo que havia sido deter
ïflíflddüvGï) ¡{a ,e«.«=::..'\ i. «i s, a _-'g r Ï"?
r Es en todas estasïícms-gadïgo , en las que nueslïfq
Autor constituye en ¿todos los‘ lugares esta diferencia
ciïtre la doctrina de los antiguos, — y lasdeSan Agus-e
tm , como sirsolos los antiguos huvieran eVitadOfiO-f
dos estos inconvenientes , y al contrario siguiendo a
4"‘ "- « ‘ -. ' sioisfiflf)
t {(5): 7P‘? ÏWPÏTÍOÏ 30g; 73o;
ipo. 451d: '
¿‘fyisnïálozsïsaíztós Padrgsï. ‘.2’:
. Sanseïgnstin rriocfueseposíble; deícarsdescaer eri/ellos‘.
iPorque pretende‘ iqnezsersiguenrde la doctrina nueva;
yparticular que enseñó sobre la Predestmacion , 851
¡como lo solicitaban tambíen los antiguos Semi-Pela
gianossNoÍobsfante ¡San Agustín no‘? insistió menos -
“me está domiñmr,e¿.-Y%q11írl fuecls suceso de esta ‘disi
pïrta? Que el Papa San Celestino antewqruien se’ pre?»
sentó , impusotsilencio a los adversarios de San Agus’;
tin , y despues que esta qu-erellavfuemuchas veces ‘ree
novadax,r;vinolfin-alníen te el Pa pa San Hormisdas‘ a ese‘
0 tagsoleïnnta; declaración’: ‘¿Querquien quisiereïrsaber los
P’ sivzntiatielitoszzde; [xmlgïesialflauzáactrïobre :la Gracia , ylïbré
alvedriozprrzo ‘teuittnmasrgue consultar’ las obras" de San ,
—Agustin‘,cy"en particular las que dirigió a San Próspero , y‘
Sunsflílariínlafies decir, las ide la Predestinacion, y del
Dón deperseverancia ¡que son lasïque‘ los adversarios
fiefian Agustín‘ bailaban mas. ‘excesivas ,' y donde
‘aun hoyrservéaquesMí- Simon acusa ‘de novedad l, y‘ de
error. , ' - ' r »
Asilo que buelve‘ aisuscitar este presumidoCrití
w.;=‘ses,precísamente‘laïaíisma questions quese ha ter- _/
milaadotyásportmuchasdecisionesï de la Iglesia ly‘ de’
los lPapascMssimbn acusaïasan" Agustinïde Novador
, en laumateria de Predestiiracíon y de Gracia: estaera
tambien la ‘pretensión de «los antiguos adversarios de
san Agustín , ‘que se . defltndian , dice San Próspe
ro , por. la «antiguedad ,. y’swteniaiz que los pasages de ‘la
Epístola á los Romanos, sobre ‘loseque este Padre apoya
ba su doctrina ," no se lzavian jamás entendido por Autor
alguno Eclesiastico ,. como él los entendía; (b) San Agustín
.5 ‘ , per
CAPITULO XI. . 1
> (a) Serm. 9.94,. al. r4. de-ïfawukpp. cap. t. num. m. '
(b) lbid. cap. 17. num. r7. (c) Ibid, cap. a1. num-M’- _
32 Defensa de Ia Tradicion,
Bautismo , y la prueba de la Iglesia‘ estaba en su Sar
cramento. a y ' _ . ' '
_ Este ‘admirable Sermon de San Agustín fue pre-a
dicado en la Iglesia dqCartagd el dia de‘-la Nativi—:
dad de San Juan Bautista , al principio de la hercgia
de Pelagio ,"y antes que sus Seétarios fuesencondenrafi
dos; pero la Iglesia que les toleraba hasta entonces,
y esperaba la penitencia , les denunciaba por este
Sermon en la capital del Africa , que no les toleraba:
mas tiempo , y ponía los fundamentos de su proximaï
condenacion. Efectivamente algun tiempo despues en
la misma Iglesia de Cartago donde se havia pronun—
ciado este Sermon , se congregó un Concilio aproba
do de. toda la Iglesia , donde se condenó a los Pela
gianos en orden al Bautismo de los Párvulos , este es
elCanon: Si algvuno dixere que no e; necesario bautizar
los Párvulos recie/z ¡zacidos , ó que es riecesario liauzízarles
a la verdad por la re/nision de los pecados, pero no ob:
tante‘, que no traen de Adán un pecado original‘ que seL
p necesita purgar por la regeneracion ; de donde se sigan
gue laforma del Bautismo que ke les administra en perdon
de lo: pecados no e: verdadera ¿ sino falsa. , sea excomulï
gado. (a) ,
Por esto se conoce que esta prueba del pecado
original, que se inferia de la necesidad , y dela forma‘
del Bautismo, era la de toda la Iglesia Catholíca en:
los Concilios universalmente recibidos. Los Padres
del mismoalConcilio
cribieron Papa SandeInocencio
Cartago.,.pidiendo
en la carta
la que es—
confir-v
macion de su juicio , insisten .s0bre esta prueba, co—
— - .. - « .. e .. .._s “mo -
_— -- _ ¡ ¡ .. ‘i .-' «t» \
CAPITULO XII.
Pasages delos Papa: y de los Padre: que establecen, la
necesidad ‘¿le la Euclzaristía en termino: tan fuertes como
San Agustín. Error inescusable de lll. Simon, que acusa
r --‘ a‘ esteSanto de lzaverse engañado en un articulo , que
' Q seguí: confiesa le era coman con toda la Igle
sia de su tiempo.
F‘: L.
C A P I T U L O XIII. ‘¿gg
pqfendíendo M. 5517-1071 que la Iglesia «zinitígaa "creyó la rie
cesidad absoluta de la , Euckarístía , favorece, publicamen
y te a los hereges condenados por dos Concilios Ocot
menicos , primeramente por el‘deBasíléa, y '
despuespor el -de1'rento.
f7‘. .1
aquí puesel error manifiesto de Simon;
(
admitir como cierto un vhecho que destruye el
fundamento e: infalibilidad de la Iglesia; — ero no es;
menor su delito en que en un particular articulo ga
na el pleyto a favor de. los hereges , que fueron re
probados por el Concilio de Basilea; Se sabe con quév
obstinacion sostenían los Bohemianos la necesidad de
comuvlgar los parvulos. Fundabanse ‘sobre este pasa
ge de San Juan capitulo sext0,y defendían que San
Agustín y toda la Iglesia antigua le havian entendi
do como ellos. Esto no pudo-sufrir el Concilio Basi
liense ; (a) y en el acuerdo que se hizo con ellos por
los Legados de este Concilio se lesobligó expresamen
tea desistir de la Comunion delos parvulos. Bol
vian a ello siempre , y este Concilio, aprobado en es
te
(a) En. Sylv. Hist. Bohem. Ñ I i
Defensa défldÏTradicían,
te pu-nto-detoda ¡a iglesia’ lgïy‘ «'- rnismoïïPapaziíé
‘cesó: de oponerse: aielloslgporqtie ‘laí Iglesia ha‘ ïentena
día que la Comunión de losparvirlos’ fuese autoriza
da como necesaria. «Pero hoy’ M; Simon viene asoste
ner estos Hereges , y condenar (ti-Concilio; porque
afirma , «¡que lósaHereges seg’¡iiao1a=’do3€tírín'a— antigua’;
y que el Concqilioy toda la Iglesia se oponia ‘a ellos.
Se vé pues yá únÏConcilío Oecumeirico , que
condena a M. Simon , y es el Concilio de Basiléa , en
los hechosqne pasaron-con‘ unaïplena autoridad _
consentimiento-del’ ‘Papa;- porque el’ acuerdóüdeique
hemosïhabladoes del año ‘mil ‘quat-rocientos’ treinta y
dos , durante las’ primeras ssesionesfqite han sido , co
mo se sabe , autorizadas por ‘Eugenio IV. y aun des
pues de las disputas siempre mantuvo este Papa _el_
i‘. Peroqúefiamáspérdló
acuerdo si M. Simon ignorórladecision del Concilio
suïvigbr.‘ Lai-í; Ïuza Zi “
..._Ï...______.__——-—-———————-—
' ‘(aí Epist. Teri-and, DiacLWáÏfFülgI"8c F13. resprc. 2. t‘. 9.
Bibl. Pat. pag. lzmysig. ‘m -' ‘S ' ‘ (N) ‘K ‘v " J
‘———n t..r—.r__
‘+2 Deflasaadelaïircfdíïsion, _
rpiós; ?Parece " que ‘el mismoíïsan ¿Agustinz la ‘dechixb,
— porque presupone’; queaun ¿rparv-glro erxíettno agus; ¿”te
regresar-ue. ¿vayan ¿‘las dguanbaufiwales, si vïiviesaúan
-poco , de suerte -,gue»:mgurieseé-'luego al punto despues del
-BIIZ¿IÏJÜIO _., rsería ‘de ¿aquellos dersqizíe/íeszíestááescrita,
que} -120; sido:arrebatadoságzorque.31 iraalizía,nm¿les: mudn- .
.se_.;.(a):.es
¿todos losdecir; qúeïse- salvariagxbien
terminossde quegsecolíge
este-¡Padre;-,gqhe” suponiaila
Www... .
.;r(a) De Anim. Szejusorgglib, :3‘. opmá-‘üiï —— V1 L)
69x32. ¡(mismas gamas; 4;,
— ._:,-»;-_e-- 7'21 ‘¿zgtucv 2th,. LL; . ..5:2_z»."¡-:«_.,<',;.:::i 1..
1.:! cup. Llsiïexc A- PLIgIÏ-Uzfi Oí¡_I¿fX_Vy¡1‘¿; fl ¡T2 si; 2.:.
¿para nie , níáax:z—¿A asii rïajjsfrzujlïsnl 38 mbiuáícírqcw
Tadarlárfleologiaz deglïaïpgfigngïmwzfirvígq ráiiswhlecgn ia
-*-ï>ï-‘ifolatïoflïvíáïïánïíïfiïslgénqïv. .3? qrúe feria «de ‘rodea . n» -
v. f‘! Iï.k'1¡¿ mi ,5’. .«1¿¡=Ig1¿¡¡‘a',Í., ‘g :...;u'-z.-,_- ve;
ímy» ¡L mishtcsanïúgustfimremefiwpaïzébïiás
zbrxocgua «partes,
swiup g’ : aaïrïsimnaa au- ¡í y , mad}?
¿ÏPERO de dónde"necesidad
" ‘tablecidorl-ia Qlbhe: ‘deSamfigïistïrí hay: 'es-’
la Iïucharistía? La .
respuesta no es difícil: Lakstabileéiórpórqueïeïeéïivaï
mente es necesaria‘. Jesu-Qhristo __no dixo en vano:
Si no comiereisVdccír/ze ïillïijo ide}! ÏIHÏHÉÉ ., y no bebie-i
reis su sangre ,_ no tendreis vidaen vosotros. (a) La Encha
ristía es necesaria ¿’peroenïsu modo; Elïeïeéïo-de este
Sacramento ,_ que es la incorporacion al cuerpo m s
Ïicó'üE'Ïes\i-'Ï3h”ristoi,‘r'és neeesarñerebnvneeesïdád ¿f6 ¿a
‘lud ;’_’pei'olSaiñ“Agust-Ïin noshateverzque esta:- se halla
‘im "élifiiutisïfriogüy elvïSáor-arriento de IIEHCÏIQÏISÉÍQJ,
‘¿amenazar para =siglaiflcar.,con— mayor‘ -- ekpresionl una
tasa ïeálrneeésanar; Eáïdfifliieirïïfitesaritygï-fpïroisieflïl
¡preïffitdtfideéelrtïtlfirág- crisis inodioconlneeesidadiáé
epïïïtfbfnsyncstnn nécesidádïdtffiíédid {cïorñbïse ha:
blpïértmffistáeh; b‘ ‘steel qaïereeupliearrï eriittenniainos
‘
N-wn“
. mas
(a) Joann. 6. w n“: ¿‘w103 (d) i 41h.‘: .8 Judá l u) l V.
o
¿yde los‘ Santas Padres;i_ gg
“mas—símP1€S—a?13íEHQlX3IÏS‘Í3:. es‘ necesaria , -cómc.>.g ali»
mérito-aparta conservar. en adelante la ggidafGhristiana;
,pero supone antes una primera necesidad, que-eslir
(de nacer en Jesu-Christo por el Barltismo. Se,pue@‘
...e.st..ar algunos momentos síihEQmGLs ¿no ¿se pued;
ser, sin havemacidos,‘ porque-sofía, Ssruantss deis:
¿Así la primera necesidades recibirula.¡yfrdg con 31,33‘.
gcigfiento : la segunda que se ace-reina ella ,_ :y_ _es_ dgl
mismo orden; pero sin egnbargo menor i: inferiqrprgs
erecibiaalímeatossnarascoasmar. la aida, Aplígad, ¿esta
‘Fombpalïaciof! snla¿Eu.eJ—nrástí,a.-.halláreís rssusita 91a:
ïxisimamente lla dífiesllfiad- 5010, restayadverrtír , que
como las comparaciones las; cosas ¿namrales,,con
las morales nuncaason psrfeéiasraentezigualss.share:
ácesídadsdesecibír- sel acslsstialiralímcqtp. de. ist-Encha
¿fístía admite. unalatituïd“, que. ekglimentonatural no
Jcjeige “¡depende el conocimiento de clladelosfprin
cipioamstifiutivos ‘del hombre reengengrado «por el
Bautismo —, á, quien lalglesía. name» se le. dá. por Má
fdlïflYáñAmflzá Unzmismo tiempo, debe: 5€ñ3¡alïï1€)s—tiem—
rpeszoportunpsipara, recibir, este=_,di_vino_sust_e_nto; ¿3 ,30;
¿HI1 “ v i ._.vr¡* —' ji , q, ' rr; ('='1,‘
;!" - I“. _ ,- _ _ -. _ 5_
_'
2.- ". 4
‘CAPITULO
#2’. -
‘. Jïïzïi". z
XVIII?"
:9‘; ‘ " ' --'_ a
y
‘S?’ '__’»C,( Íïl" '.’Y.fZ‘v,:‘ft¿gi"i"r¡,g;j
(a) Joan. 3. 16:18. (b) Úbi supra. (c) Sermrh94, al- 14‘
ya Dfianéa dela Tradition,
tin , y de boda la antiguedad. ‘ï- -si responde ,qu'e no
Ïes él solo el Catholico ‘que ha entendido asi á San
Agustimle replicamos,o ‘que estos Autores no ha:
blan como él , nise oponen tan claramente a la infaa
libilidad de la Iglesia , o que: están comprehendidos
enlamismapexcomunion. ‘ «t. -" ¿a ¿M? la J '
' u. - N‘. ' i)
cAPrTULo XXI.’ n:
\
_V r __ CA;
‘ÏáïPas-nsv '° 1 ’ "
y 2227105‘ Sézfitoïs Pzzcfiieálï y;
".) :7)’: » . i'>.<, .. .' wtiu .- .. v? '.(.- 7-}
CAPlTULOiXXfl-" rerú».
(a) Pag.;49.. O a
56 Deflensd. de la Tradicion, ser‘
terior de la doctrina de los Padres. Cayetano que ca
si no sabia la.Tradicion, y que escribióhntes del Con
cilio de Trento, puede tener disculpa ;pero M. Si
mon-que lo ‘ha’ visto todo , que despues de haver‘. re
conocido el consentimiento de los Padres no dexa
de insinuar con sus ordinarios ardides el sentido opues
tora ellos,‘ no-podrá menos de decirse que es Heregcr.
El amor de la verdad debe alexar de todo lo que la
debilita. Yo diré con certeza , que se está proxímo a
seLHerege, quando sin poner cuidado en lo que favor;
recela heregia, solo se evita lo que precisamente es,
heertico , y condenado por la Iglesia. e l» o
_:¿'
f. ‘jI
í v.
r J
,. . l‘.,1 . ,_ y_
5 Ïi A"; 7'
s.
A r '
c. 1.3i‘. E’.
' 4‘
.
..V . , _.l, .,¿
: i’ v Ï L - L" --) .1
' - ïuu , AIJÍIJÍ'(‘Ï u‘.
ïfi ’ . . .. T ' - ' ‘ ') v‘! ¡(ride in’ =¿.'.
. . - _. v .' _ ' , k. n . 4-”: i P.
. .
i; . _ I ‘o
__ . ‘ .7
a ¡L 4 ¡'4\ {el ¡La
. . ‘ e _. — -__——_ _.-_..— -—— ..« ‘¡rr -———m-y——— s,
elsewhere,
_‘2Í’Í’"¿"‘:?'j;¿_ï_Bf120 ¿‘Silvia 17127110. ‘ \
PÏrÜsi”"Áeñ-‘ los :ei'r'g‘íir‘esï’sübré= Ia‘ Tradicionf
rifa ‘ilïin, ¿urinaria ae ¿la ‘iglesní ¿1ars¿;ae~g~cei
, impu‘gn~ada;,.¿Egro;es,~, sobre in Escri- "
‘ turas,,'zy'ïsobre las‘ pruebas «de la
¿’ra-á ti; L: ‘i Trinidüdo‘ i
’ ¿Íiii ‘i ‘mi, u: '
,, , . .
in} iiïirïm. ji C AP p Ii
.».'¡, f _
(a) Pag. 9;. (b) Pag‘. 94. Ibid. ¿»s F233 t")
a z
ñ
a
a -o. . ._¡,,
I r u
3 __ uf.
W
.-4._.-
60 Defensa de lcíTndclicion,
tura , como de- un principio clara y evidente : esta palabra
zíijici-l , es un termino de providencia , por el qual se
prepara ‘una evasion contra los que le acusarian de
debilitar las pruebas que se deducen de la Escritura
contra lafiheregia Arriana ; pero en la realidad él mis
mo se declara , y a pesar de sus precauciones se vé,
que soloha referido esta disputa para mostrar que
nada se convence ‘por la Escritura, contra los enemi
—gos de la Trinidad. ; _ 2'».
, Asi por la vigilancia de M. Simon, los enemigos
de este Mysterio están a cubierto de las pruebas de la
Escritura. Quiso hacer este favor a los Socinianos.
Confieso que no concede mas ventaja al Catholico,
que al Herege. Pero M. Simon no ignora, y¿,aun él
mismo en otro lugar publica el discurso de. estos He
ireges , que sostienen que para excluir de nuestra
creencia una cosa tan obscura como la Trinidad ,— bas
-ta_ que claramente no se pruebe. (a) _ p,
. _ No se detiene aqui , hace aun bolver a salir los
dos combatientes. Buelven , dice ,' ¿z el ataque. (b) Pe—
.ro sin adelantar cosa alguna , porque despues de haver
—obs'ervado cuidadosamente, que la dispúta no estaba
apoyada de una y otra parte , sino sobre pasages de la
.v;Escrit-z¿rcz, (c) y havia opuesto lo mas fuerte que tie
,ne , segun ¿nuestro Autor, concluye que esto hace
ver , guegsi no se junta‘ una, Tradicion constante ¡z este méta—
_de ," e-s- dijícilfzaljlar la Religion clara y distintamente en
dos‘, libro: Sflgrgdos ,, _c:0n2o se puedejuzgar por todo la que
’ se acaba dereferir. - ¡_ —
De esta asuerteno, aparece aquí la Tradicion sino
. _ 1 c‘ ‘a
O. u:
¡f ¡ u.r'_
3.10‘ a. ,
_ , "(sudelásiSantossPadres. 6r
¿(fin de hacer pasarla proposicion: que en materia
_de dogma de, Fé , ¿y en particular sobre la Fé de la
,.r'frinidad naflaaseardeïianta; por la Escritura ; y por eso
añade el Arltonz: jPero-zfiualmente , bien que la mayor
parte de. las razones de Atlzanasio tomadas de la Escritura
fuesen urgentes , ÁITÏO nofue convencido: (a) con lo que
intenta‘ hacer ver , que el efecto de las pruebas de la
Escritura es ultimamente dexaraarcada uno. e_n su
opinions, sin que hayaen estas conque convencer un
-Ar-ria‘no. : ' s’ w .' -
CAPITULO II..- «.
-‘.' .1." . — r; ,r=:.¡-’.s... .1;
Que, delzilitando las pruebasvdejla Escri ara sobre "la-Tri
.:- — V .--Í nidad
' ',‘. igualmente;
i Í Tradicion.‘ * ‘f; e la -
debi/itaMSimonlas-‘de
J
l ,-vv r - ' i r
‘~—-—__—__-—R
(a) Ibid. (b) Ibid. (c) ¡sidad-i (s; ¿mas c)‘
if
64 Defensa de la Tradicíon;
¡mes verdaderamente Átlznnasio. (a) ‘Lo que ‘desea’ ‘acer?
al Leétor , que San Athanaïsio no admitia la divirii-Ï
dad del-Espíritu Santo , o a lo menos queno hablaba o
tan Vclarraimente- de ella , pues se‘ prueba que ¿no ‘eséli
Autor de‘ un discurso ¿a causaÏque en él" sedefiende; p
33' " É M‘ i i . dq‘. '. ¿Sai
/
,12 ¡yÏdeJoLs Santos Padre}. 6g
-1, No jes conyenientegdisiumlar, lo ¿que ,. advierte en‘
este mismo lugar , que aunque San At/uznasio casi ng
‘oponga ¡z los Árrianos sinb la Santa Escritura , no despre
ció laspruebas que se toman de la 1'radicio, .(a) y finalmem
«te él mismo nos ‘remite aláarlglesia , yfal Cpncilio Ni
ceno. Pero por lo queflmirafir-la Iglesia , y al Conci
lio no tardará el Autor en quitamos este refugio que
parece nos dá aqui ; y en quanto a la Tradicion se v,é
desde luegocpn qué frialdad habla de ella , pues se
contenta con decir que» San Athanasio no La desprecia.
Nos dispone por’ esta palabrillajïi lo que dirá mas cla
ramente en otra parte , y; cgnocemos-ñanticipadanlente
el principio que estableceparaarruinarla; _ , . -,
Advierto pltimamenttepn el mismo lugar lo quer
dice; clesSan ¡Atlmnasio “que. asu. deseaba alfin 46.514 m?
más: de alan EIIMWPÏPII «deéaïferlea, de 40114.4. ‘sacaba 1025
yríücifiar.—.¿r;1.e)Tl44019g¡4:(b9 Enrqaejzabumdo su ¡este ¿r4
, gar-figurar dirige su obrcrrlef dice z-Sïdespues de haver/ek
do; [aque QIrBjGÏIbIWOÏHPIÍMÜK seriamentaui [a {eceiah deja;
libtaszaamdas‘. enfelieszglerrit ¡nur/m rare/ar. M; Lfiíírflfllk
meme-Ja verdad. ¿amdolq guaraságenflïnrouanseaassal?
hrahaiabasznrlaraoszá; qonpsegque- nadazhawsizx-«sqnxisr
Gente en las pruebas del la Escrita-tai... Aqui hace decir.
á San Athanasío. .«,que:nada: lrayLmaSs-flaso ,: ¿a request
termina pues esta contraríedadi¿asgncluir,'pur,pna
parte quelos Padres, y el mismo San Athanasio ,que
es el Maestro de todos los demás en esta mate—
ría, han pretendido hallar la Trinidad claramente
demostrada en la Escritura , y por otra parte que
la experiencia nos hace ver 1o contrario, y que
Tom. I. ‘ I las
"‘_—_—-—————n——_n—__'——
¡u .. H ‘ c - r¡ _\ __ i, : ‘ ' __! 1 I ‘
‘ I . \ .4 .' I .l QI
(¡l! ,.
V’
I’ ¡D r .J Í L
¿tu
n . Y ’ . ‘
Ínif.
(S)lib.
péNápïiib. a. g. 1 s;Prcedcst.
4. cap. 8.i&c.'De* ¿anarSS;‘agent.
c. 14. é.opertirnperfl
¿EL s; sea. "adlíb.’no;
2.
deDpn. pets. lib. 2.. c. 19. 80:
72 Bfilzáïz de Jcaïrdzííciqfz,
mono una de las pruebas mas autenticas para autori-r
zar su doétrína sdbreiel pééaíoldíigïnal. No hay co
sa que mas apremie , que la Tradicion del Bautismo de
los’ parvulos , y de los exorcismos queráehaden sobre
ellosvpara libertades del poder del ‘Svdemonio. ‘Rara
establecer. su dofitrim sobrexlafiredestisxiaciort, y sobre
el Dón de la Perseveraneiaz, quenson materias cone
xas , nada alega mas poderoso que las oraciones de la
Iglesia,que no cesa de referir como .el instrumento
mas patente dela Tradición.’ : ¿Si M. Simonwhuvitira
leído estoslibros , si les [naviera , por decirlo asi , s0,
lamente ‘abierto , diría que San’ Agustín no se valede
la Tradicion sino alguna’: veces? Pero resuelve, sin leerá:
no hace mas que echar la vista sobre algunos pasages
conocidos; esto basta para concluinque San Agus
tín hablzralgunaa vega; ‘de 1a Tradicion. Para ‘decir
masysería menester haverse aplicado ‘atadas susiobtas;
pero no las ‘meditavsolo, ligeramenfieepasala vista
por ellas. ' - s; -. pair
¿Se ba- leído y, meditado. a San Agustín; quando
se asegura , queda prueba dealztTradik-zion no-_,esí para
él sino aéceroria‘, ó solo cntraiaocidentalmemer ¡(«Upt
ra acomodarse ‘alos Pelagiahos ,* quando ‘se eve’ al con:
trario que insiste continuamente sobre esta. prueba,
como sacada de lo interíor_de su causa? El mismo M.
Simon produce este pasagedc- San Agustín; dond:
muestra que los Santos fadres, ‘cuya autoridad. alega
contra Pelagio, mo pudieron enseñar al zBueblo; sia
no 1.0 que havian hallado yá establecido. en 131gb
sia ;— ni diciendo lo que havian hallado estableci
do en ‘GIHPÓCÏÏan decir’ otra cfiíïfqfiïïcïcïrïefi
P'adres' h?‘.’.““‘ .d<=',><.ad<,>;'.. ni} éri L tbflé’ lflésïÍrï-ïmas.
.9 í «z .2 .2 .231! anggalqfie’,
- I x v rs
déïZM-Sanïosflasïresf‘. ..‘
qgfiqgiqwvenraïaeerésqtrpospfitesmyugïsrsssexinsa}!
guisantes prestadógíïyiuïnáïpiïaebaïaeïseïsbriaïgïifl eltfoni
üPcreilatïzau-sai’ ¿Gonfesemoss ‘pues:Etre’ MJSisñon ‘gi-que
ie-ïhaee" liablsrrdeilazïïradicien iteíunvïmodb ctaníddáa _
piecÏiabÉ ynoïexanuna loqueïsléeesfirncïafiéïmeílelos
peljliiéíosifiïéfüef SÜCÏÉXRÏWÉVBYÏÍYSÏflntyx zr.\ evita. oí‘:
dbsxïí‘ al v , sis-b nlïrsidáraíi .?.‘)'R.‘4IJ3l13&:ïi al supiera
~m <'vr<'€3'rA’-I>‘iI'JPU-Is;0:rv‘íX9? ,—
zïïlauï Ïniuxsïzxi‘ sgkii... : e hi ssfiísurasí, en ¿mas ‘
‘asiática-Hewitt marihuana‘
"j ïüáiiiéndásel-ïágóan
10*»: midensüïïeítesïifiafiitïhéïrïnïïcftbïsfivïbáy‘lo' indio. 03:33
zrraïlzirfl 2:12} nubes mtb ¿e muíiraaïï 2.! ‘m. ¿sra im la
e ’ omïghusxacomese assess-repensar la Tradition;
* .' r habiïándocdefsatiïrii‘ arioflquiMb observamos:
esgeesareurdááog? ‘¿in? {nase-apoyausüááersá;
ïiïadifiioiiés‘; wsaZzfie-vosïieïtïrïsontasdeïlosunaguqs-Dosztïa
¡‘eii sino’ soiazfieizté sobFé-‘lbsfilibííosísagradosz? (b) Esaïeï?
dad? que‘ insinúa en el’mismo lugar‘, que San. ‘Hilario
usaba deïéllosï-asiïparaï eomtiatir- ‘los Arríanosegpors’
su propio principio , y aun_seg_un su ¡método , porque la Es
critura era su fondo pir-incipïilïc; “i Í‘
Parece pues que San Hilario no admite la Tradi
eipnjsíno pararacdmudiarseïa 1os‘Ar‘r/íanosr,..p‘er0_ï-ló,
contrario se manifiestrï-ï-pbrkïlas‘zpalabras siguientes:
Supone (habla de San Hilario) que los Arrianos conve
niiáfrentíasïpirintipïbsüon loifliazïiotlccïs, teniendotavplzbi '
tidosí ‘las mismacfisciíturh ‘¿by ¿quemada m diiputa. solo con‘:
sistiaeni ‘eiïsentidoïquezse laradebiae dar. éd),Si. c1’ principio
de‘ los ¡Arriarrosteraïisolamente ¿la Escritura ,‘ ‘y sítSan. ,
ncflámnf,‘ :.:' cnica ‘Jéïlflzüïif; K;Ï‘.nu;2ei31.o:n nHi-‘d
' (a) íbiá.’ (bj ‘Mázïh.’ dé. vL {ag {cfiïa}; .3. '13. ‘, z
¡»decir estascWWy-ïiííe-Íok
palabra-ls; queSezíziosïpáxcíres.
contienen todar la fuerza de
78 iïzgzïigawzgn,‘ _ .
tiaflliïïyéfiépïïígóéïrfirïüebfiskbn gvashmá del-Tim)‘ déPEá-o
P¡«¡.'¡t',¿¡;Sa¡ñt¿.¿¿-S¿n B¿g.¡[;¡b_._:1k;__n:.tw L1 nq c sim; .42‘; ; ‘cm
¿mi samcregorib Nisgaéygü ueïaíáiáeïqueqew
deja; prócede con eï-miigggabáewezízvy ‘cïíflfinïfhféláíïlüïs
m-tsaasossprintipiag:sgh!Gyégbrsaïavwïanïbïsïbaïei
¿le enfitodo y pórctóüió s’6gï1fi‘ésl‘“afr'eg1'a’.ï’Y‘ ’ f6‘?
Here es; querifan
‘i , qué
- wiíféasbïsïïdéaaïïdtéhssïïdfiépcn
se leyese qrrïaïEstlfíítüïa
V
3€) De énSa’ï'ZÍ¿’—Ía' ‘¡Üafiícïorz "
‘gnfwaa’ Logieateaizvaaáo-er eitrixïwaalïrfleóiágd
¡sb agcéugaciaïg" y’-’do’1ínó‘s'í>nó'sé húïrïbráïfisée‘ bfieïcq
ékplícado dé ¡iii hodcïfigïstantgïdésfirécïable :‘ ldtgrgkizí
¡e! Grqdóré: i; tbñtinúiï ¿se ‘apbyagz de ofdfindrïo br“: rztfiol
fiés‘ qtze‘ ‘tiegzaii-‘aguïnzruïïebït ¿{Swiergezfiau (tabmsté téïhïíiïld
tai-grandes ‘VÓ/‘ádoreÏ-‘ijhï’ basttgnremgneeamcsr’‘se’;
éátïió‘ Banega; déTriiiéstfcï-Crïtïcó.’ Nosasïaabxanaó
¿on propiedádunigrapde Orador , "sino-jurï Reto’: im;
pertinente quando
ïqní’ y *'río"_"d’e'l'a se contenta de-aparíencías
fáïón‘Vrhisñ1aZ,»&c—;-"‘-3"‘‘U "de m;
"Ü “"31
.4‘?- Ved’ agar coma se‘ trata’ A QbQ-‘¿doá mas ïsubljmeé
Theologos de su‘ tiempo fly en’ paítitülár ïirïSdrirGréi'
_'g9ri_o Nazianzctuo; áunque elOríente" le ¿haya reve-z
fenbiado ,7 de _modo‘“qu'e lefhahecho, como sé hzrví?
io; Theólvogo :— eÉI-"rio óbstánfé‘ im” Reich‘; es‘ dééié}
un ch"zttïa'__t'án'v ‘qu:fpífiágakpariéhcziá: escenas -‘,' —1a'- ílüï
Síoh póffla vefdadfl,‘ así comosu amigo San Básïlíb‘ ‘en
elflíslcdrsoïmas sérïdquc: jamásproxjutipïó.“ ‘?U"¡‘—‘-"—'* "3
‘f? Ejlostbrgio ¿Históqiaddrgde lqsï-Arrïgarïoyg-‘yuenea
ñfixgó ‘de’ Iá Iglesia",- ¡habla écíriïhas Iveneradíofí de- esta;
gfahdésl hombrés gïïpófqqb hdmi-fa »_ eh’ ¿IIÜS ¡á "sabiduü
ríáf, 1a ïerudicion , la ciencia‘ de las Escrituras; hasta
Ggéíf ‘que lesfintepohía i: San Athanasíd: ‘y por ‘lG-“que
Ifiífá —al> discúïsó átríbuye pa rticúrlarmetnéé ¡á ‘Sim íBasís
lïó lá hóbléh“, "yflïfirmeza c‘ovn lafiermosüra’; y?!
San Gregorió Naziárpzenó ‘la' soliaézconiïlaïgrahdezá‘:
Vedaqui qualéïérán eri‘ láwboca‘ de losArríanos sus
éncmígós‘; ay ábháñístgï quáléüson" en ia de M. sia
éñón‘; afetïïá reverenlziïarlesg S’) n18 sb eáib imp (¡I
“WI” ‘x573 3 °“;_;"\0":‘5-"fL-s.‘g_ \. un: 2;. ‘¿mx tat.°..'ts‘-is'isszgxt.
f.‘ CA_
A
Haas-ym. r. r Á
(a) Ibid. (b) Pag. 10s. (c) Pag. loz. «mr-ari f3)
g‘ de .705 SdniosPádfés. .283
gue síempreï el-iuxeïwádzbïzaturql. «(a)» Refiere: gnïexetxrplb
"de ‘qu'e"no=-'qu.ije11o dispútar’ ;‘ ¡porque ' no’; es; ngcesarío
que; hayán dexser síemprejigualbsylasy pinchas-ide, los
Padres.‘ Lo‘ que es necésáríwaïdveïtit- es », que pana
¿una fpruebá de está naturaleza tienen’ los Padftegum
infiníflad de ellas‘? taustonvfincentnsn; qué-los. Hálïegts
‘ho ‘rpóclianï’ responder ,SÍ>DÓ>pOr‘neG€d3dC5=MIIÍfiéStQ5.
zTodo“ Íseéïór rprïudénté. hará: este‘ ÍÜÏCÍO‘; y- sin, est;
. «tdvertencíá» hecesariálos exemplos-de semejantes de
iféétos», ele-que elAutor hallgnado su libra , solo ,51:
wen para ¿insinuarï eh menosprecio delos Phflres , cuyo
‘designio reyúaymtúüzstrpbrm- Í y; , c <2 ‘Í. : ni‘.
¡Bibi Si? ïïízlbfiï-‘üfiiíïy; 5a L.» ' v; (-5: f,--¿ÏÏ-¿;
a. m. »., c A.P 1 ru L-Q XIV.’ v V ' _ —_
7 7 .— ')
' ERQ < las’ ‘pruebasbgz rnétodot que. mas débiles ‘se
representanflson’ las-de San Gregorio Nazianze
no. Es‘ en sus oraciones-contra Eunomioz, las queco»
mb haiirémoswisw, ‘¿le shan “adquirido. a, estégranlDocs
‘ttïrïelïtitulolde Thebrogo ¿r porque‘ » sostiene emïellras
contada solidéá l'á-‘verdadera"lïheología; es ¿digbaen
estas ‘oraciones donde "seïcolocauen el numero de aque
ilós ‘gue-se contentaréïde apariencias y sembrar .del'razáiz.—ï(c)
Es vereradque sélntodera divalgsmmocld esteguGritico
f F3 s; ..l te
......,. ..,. . ........- w0u—mpo—-ú-M.g.
ÏCAPITULO xvr.
uQue- el Autor‘, semejante en esto á los Socinianos , procu
ra hacer ¿z los Padres masfuertefen discursos y‘ eloquen
¿cía , que enla ciencia de la: Escrituras.
u, --— GTO es Idsque elAutor bonos. dexa que adivi
nar en el lugar donde empezando .la critica de
San Gregorio Nazianzeno habla de él en esta forma:
Lo que se ha notado. arriba. del caraéler de San Basilio en
los libros que ha escrito contra los Hereges, se halla casi
enteramente en las disputa: de’ San Gregorio Nazíanzezzo,
que no se apoya tanto sobre pasages de la Escritura , como
sobre lafuerza de sus discursos y expresiones ; concluye fi
nalmente diciendo , que Iza sido un gran Maestro en el
arte de persuadir. (a) Esto es lo que aun hoy quieren
los Gocinianós; ' c ' '
z. Los discursos de losiPadreslantíguos , segun ellos’, -
son discursos de eloquencia , o por mejor decir de de
clamadores; o como mas agrada a M. Simon, de Re
tores; que nada tienen de convincente. San Gregorio
Nazianzeno consutitulo de Theologo , tiene como
los otros una eloquencia charlatana , destituida ¿de
fuerza y pruebas. Lo que-añade de este mismoPadre
para escusar-le de no apoyarse- mucho sobre la Escri
tura , que supone que los que lc‘- Izan ¡precedida han apura
do esta‘ materia,- y queen: inutí! ‘repetir lo‘ que fiayían di:
ello. (b) Solo es un sobre escrito de lsu. malignidad.
Porque fuera dehaver visto que ‘entra A en prueba
' quan
(a) P450”? (b) ¡l! ¿han .293 2.1-?! r1». .' ¡'
88 Defensa ¡de lïaïyrkzdícíqn, ‘
quando y como es necesario, de nada sirve decirnos
que reposa sobre losíïesbrílzóï precedentes , despues
que ha trabajado en hacemos ver que los antiguos Es
critores San Basilio L, San Atharrasio, bielziqueubaréo
este nombre tan debílmenteldispufa (nada concluyen
por la Escritura : 'de modo que losHereges por este
camino parecían siempre ínvencibles, lo que en el es
píritu de todos los-Padresgxcónío copfiesaM. Sírfigéjï;
eslo principal. a «fue zïnuí: ‘¡ags-l ¡a M. 1.": " '
. (a) Pag: 97. Pag. 99. (c) Pag. 91. (d) Pag. 10;.
(e) "Arriba. Cap.1¡.&seq. (f) Pag. ug. ' ,-,a\)‘ —‘
90 Deflensqde la Tradícioflg '
nuestro Autor, no ¡se apqya sobre la Tradicion , sino
solamente sobre los libros Sagrados. (a) Y poco despues:
los Arriazzos convertían en los principios con los Catholicos,
teniendo de una. y otra parte la misma Escritura , y roda
su disputa no consistía sino en el sentido que se la deis
bin dar. ' ' '
En la disputa de San Agustín contra Maximino
sobre la misma materia de Trinidad , si el-Herege pro
testa que no tiene otra voluntad ,que someterse ala
Escritura : San Agustín por su parte no hace menos valer
las pruebas de la Escritura. (b) Era pues en la Iglesia
Catholica unaverdad reconocida ., que las pruebas de
la Escritura eran convincentes. -
Si se puso la fuerza de la causa sobre la Escritura
enla disputa sobre la Trinidad , en la queSan Agus
tin tuvo contra Pelagio no se pone menos; yá hemos
visto que M. Simon le hace adelantar la evidencia de
laspruebas , hasta mirar las de la Tradicion como
superfluas, (c) en lo que nosotros mismos hemos
notado su exceso.
Es pues una Tradicion constante y universal en
la Iglesia ., que las pruebas de la Escritura sobre cier
tos Mysterios principales son evidentes por sí mis—
mas, aunque los Hereges ciegos y preocupados no
conozcan la eficacia de ellas -, y M. 'Simon_nos ense
ña , que aun en los ultimos tiempos havia sostenido
Maldonado , que por la fuerza de los terminos no luz
vía cosa mas clara para establecer la realidad , queesta
propcsiciorz: esto es mi cuerpo. (d) Tanta verdad es , que
' ï‘ ‘ la
0- .
Mz ‘ ' GA‘
92 Defiensade íaTradicion,
: 35'31. - ‘e. * « « 53.::
.;_--.; .._7CAP-IT.UL‘O:XVIIVI. —. 3
Que elzfutor impregna claramente Ia tutoridad de la Igle
- sia baxo el nombre de San Chrisostomo , y explica a este?
--— 2' ' Padre como un Protestante declarado. u J
.' ' u ¿‘by _ 7' - m;
_ _ -_.;._«
“-1. _-. —
4/
J de los Santos Padres
' .0 ‘ 93
\ tie/viniera Re/ígian ¿z la falsa , es ¡nenester suponer una ref
Iv
vielacíon. Por lo que añade, que si creemos ¿z la Escritu-i r
7a, que es simple y verdadeia, 5era’ fact’! ízacer esta dis
crecion , y especialmente si Izay-juicio y entendimiento. J
‘ on Pregunto aquí a nuestro fiutor: ¿‘qué pretende
por este pasage‘? ¿Corr quién se las tiene? ¿En favor
de quién hace esta observacion? San C/zrisostozno no
remite ¿z la autorzlíad de la ¿[cría este hombre vacilan
te , sino a la Escritura que es sinzple , donde hallará un
medio facil para discernir entre tantas Seítas quál es
la que debe seguir. ¿No es claro lengnage de' un Pro-_
restante el que pone en la boca de San-Chrisostomo?
¿ Dónde está este hombre que a cada paso nos decía,
que nada seadelantaba por.la Escritura , y ‘que era
necesario recurrir a la Tradícion ?ï Era menester pues
embiarle aquí a ella , si-sus principios tuvieran alguna
consequexlcía. Pero no , dice el Autor, San Chrísosto
m0 no remite a la Iglesia , y de consiguiente ni a la
Tradicion , porque como se acaba de decir , la Tradi
cion no es otra cosa que el sentimiento perpetuo dé la
Iglesia: remite a la Escritura , que por esta voz viene
a ser tan clara , que con tal que se tenga prudencia y
juicio , será facil tomar partido por ella sola , sin que
se necesite recurrir a la Iglesia. No es necesario aquí
discurrir para descubrir los sentimientos de M. Sí‘
mon. A pesar de lo que esparce por todas partes en
sus libros a favor de la autoridad de la Tradicíom-qite
es la de la Iglesia , a este golpe se declara a cara des
cubierta.
pero no esElpermitido
espíritu Protestante
dísimularlo ;, Asi‘el
lo digo con dolor,
espíritu Pro
testante se manifiesta , es cierto que un Catholico de
terminaría a este‘ hombre ‘dudoso por la autoridad de
l .
.. s. \ia
94 _ Defiensa’ de la Tradicíoiz,
la Iglesia , mas clara que el Sol , por la sucesion de
sus Pastores, por su Tradicion , por su unidad , de la
que seahau separado todas las heregias , y llevan en es,
te carafter de separacion yde rebelion contra la Igle
sia , señal evidente dcreprobacion: San Chrisostomo
habló con. frequencia de este hermoso distintivo de la
Iglesia. Dixo’ sobre estas palabras : Las puertas del
infierno no prevalecerdn contu ella , que San Pedro havia
establecido una Iglesia mas fuerte-y mas constante que el
Cielo. Dixo sobre estas: Yo estoy con vosotros Jzaïsta el
finde loslsiglos :_ ¡ Ve! quéfiutorida_d! ‘Los Apostoles- no
debían vivir hasta _elfin de los siglos, pero habla en su
persona ¿z todos losfieles como componiendo un solo cuerpo,
que no debia jamás mudarse. (a) Hadicho , nada bay mas
¡‘irme que la Iglesia : que la Iglesia sea vuestra esperanza:
que la Iglesia sea vuestra salud: que la Iglesia sea vuestro
‘refugio : es mas alta que el Cielo , y mas dilatada que Ia
tierra, nunca se envegece: su juventud es perpetua. Pa
ra mostrar su.firmeza e inmutabilidaa.’ , la compara la Es
cricura a ¡una Alontaáa. La misma comparacion dá ‘a
‘entender, ¿que debe brillar ¿z los ojos de todos los lzoznbres:
quanto ¡iras guerra se la llaga , tanto mas resp/andece. (b)
Si M. Simon no quería tomarse el trabajo de buscar
festos pasages , y otros muchos tan‘ exactos en San
Chrisostomo , no debía omitir lo que se hallaba en el
mismo lugar , que parecía querer copiar: porque ¿no
es manifiestamente .embiar este hombre dudoso a la
Iglesia , a, su autoridad , a su unidad , de la que se
, .fl»1a_n separado todas las Seétas ,* hablarle en estos ter
minos; Consideran’ todas estas Sectas , todas ‘tienen el
nom
CAPITÚLO XIX.
El Autor suponefalsamente , que San Agustín desprecia i
la autoridad de’ los Concilios. ‘Traduccion falsa de un pa—
sage de este Padre , y designio manifiesto del Autor , deh
trayendo la Tradition , y autoridad de la Iglesia,
de conducir insensiblemente los espiritusa la
indiferencia de Religion.
i‘ -Oquando
se declara menos a favor
exponiendola de losdeProtestantes,
disputa San Agus
tín contra Maximino Arriano , hace hablar a este Pa
dre de este modo : Yo no debo a/zora valerme contra tí
del Concilio Niceno; ‘como de.unperjuicio, ni tu debes servir—
te’ del de Rimini contra mi ;} hasta aquí refiere bien las.
palabras de San Agustín : pero quando le hace decir
mas adelante ,‘ nada hay que nos obligue a seguirles, (a)
falsífica sus palabras, porque San Agustín no dixo,
nada hay que nos obligue á seguir( los Concilios de
Rimini y de Nicea) lo que denotaría en los dos parti
dos en San Agustín ,» como en Maximíno una indife
rencia acerca de la autoridad delos Concilios , y 50-
lo dixo a su adversario con su exaftitud ordinaria;
Nosotros no estamos sometidos. , ni tu al Concilio JViceno,.ni
Tom. Í. N ya
98 Defensa de la Trddïcíon,
ya [de Iiimini.'-(a) ‘Lo que demuestra estar muy remo
to de tener. indiferencia acerca dela‘ autoridad del
Concilio Niceno , como se quiere hacer creer por una
Tradicion infiel ; al contrario se somete a él con todo
el respeto que le hace decir en tantos lugares, que lo
que estaba definido por un Concilio de toda la Iglesia,
no se podía ya poner en duda por un Christíano : y sí
porque no apremíaba asu adversario por la autorí
dad delConcilío Niceno, se quisiera concluir , que no
recibía la autoridad de él , o que creía que los Arria
nos, no debían en el fondo someterse a ella,‘ del mis-.
mo modo se podría creer, que no recibía el viejo
Testamento , o que no creía que los Manícheos de
bíesen someterse a él , porque no confundía estos He
reges por la autoridad de estos libros , que reusaban
ïeconocer. ‘ ‘f f ' - ' l "
(b) HPOCO tiempo despues de. la célebre confe
ssferencia que‘ M. de Meos tuvo con el— Ministro
nClaudío, este Ministro opuso este mismo pasage de
nSan Agustín á la Señora de Duras, en cuya casa se
nhavia’ tenido la conferencia : se comunicó la obje
ncíon a M. de Meos , quien respondió lo siguiente,
saque insertamos aquí por ‘no perder un apíce de las
nObfflS de este grande hombre. "
nDespues de nuestra conferencia M. Claudio pro
npuso á la-Señora de Duras este pasage de San Agus
nfín , sacado del quinto libro contra Maxímíno Ar
nríano , donde habla así : Yo ¡zo debo ahora alegan): c0
15m0 unperjuicio el Concilio de Nicea , como ni tu dzlzer
saalalmrme el daRimini mi yo reconozco la autoridad del
' L MCO?!
(3) CODC-Maï- líb. a. c. 19. 0.3. (b) Nota del Editor Francés
‘rw-v ww —.rv...—.._vw ,,
'
nCwzci/ío 'de
. yRímini
de los
, m’ Santos Padres.‘
tu la de! Concilio de Meca- Sin
99
‘nzmmazzo; de las autoridades de liz Santa Escritura , que
mon comunes ¿z entrambos , y recibimos una: y otros, y hac
¿gamas por este ¡medio combatir la ‘cosa con la cosa, la cau—
, 555d con la causa , la razon con la razon. Es ‘facil ver que
gestas palabras nada tocan a la question que se trata
“entre Catholicos, y los? Señores pretendidos refor
nmados. Se trata entre/ellos de saber si es necesario _
nrecibir sin examinar los decretos‘de la Iglesia Uni
nversal hechos en Qoncilios Generales. Es pues cla
,,ro {que San Agnstin ‘no dice que los Catholicos no
udeben recibir sin examinar el decreto del Concilio
“Niceno, sino que el mismo San Agustín no debe
“oponer la admite.
nqne no la autoridad de este y Concilioá
A un
. Arriano
i’ i,
' suEl ‘proceder de SanAgustin es muy semejante
nal de un Catholico , que teniendo que ‘tratar del
“¡Mysterio de la Gracia con un Protestante, le diría:
nYo no debo aqui tratar contigo por el Concilio de
nTrento, ni tu contra mí por el Synodo de Dordreht; '
nporque tu no recibes el‘ uno , ni yo ‘el otrogtrate
JÁmOS del punto por la Escritura,'qu‘e es comun á
“los dos. ‘ ' _ ' —
nNadie dirá que el Catholico deroga por este pro-p
ucedímiento lo que cree de la autoridad de los Com
stciliosv, ni delde Trento en particular; y por omiv
ntir en‘ este lugar loque el Protestante le contexta,
uno se sigue por, eso que le abandone. ‘Pero se dirá:
“¿San Agustín cree ser necesario mantenerse en la au-e
ntoridad de la Iglesia Universal sin examinar ? Si, sin
sadoda _:g_y__tresu
{alPrflinner hecho:hechos
vvdisputa
indispntables
«nun- pu,»contra
.
lo demuestran.
“los Ïelagianos , y 13s’
Ng ¿g ¿ns ‘¡prue- ¡a
vr oo Defensa de ldTfadicio/z,
aprueba el pecado original por el Bautismo de los
nparvulos;y ved aqui como funda su prueba ‘: Es una
“cosa , dice , sólidamente establecida : se, pueden tolerar
alos que yerran en otras questiones que no están aún- bien
mexaminadas , ni decidida: por la autoridad de la Iglesia,
' vEste error se debía tolerar , pero no se debe empren
mder desguiciar elfundamento de la Iglesia. (a) Lo que
saaqui llama mover el fundamento de la Iglesia es du-.
udar de las decisiones. Segundo hecho : Los Pelagia
nnos havian sido condenados por los Concilios de
uAfrica , y el Papa havia confirmado los decretos de
aaestos Concilios: nadie en el Obispado reclamaba si-,
94110 quatro o cinco Obispos Pelagianos. San Agus
ntin explica a su rebaño lo que havia pasado: Dos Con
nCÍÍÍOJ de África celebrados sobre esta materia izan sido,
«ndice , enviados a la Santa Sede, las respuestas izan ve
nnido , la causa se terminó, plegue ¿z Dios que el error se
nacabe. (b) Los negocios se terminan entre los Chris
utianos , quando la Santa
aacopado. i, Sede conviene con el Epis
“Tercer hecho: San Agustín disputa contra los
uDonatistas ,que decían que el Bautismo dado por
75105 Hereges no era válido , y que era necesario re
niterarle. Estos He'reges alegaban la autoridad de San
“Cypriano , que havia sostenido su sentencia. San
nAgustínescusa a San Cypriano, porque havia erra
ndo antes que fuese decidido perla, autoridad de la
ulglesia Universal , que el Bautismo se podía dar va—
nlídamente fuera de la Iglesia; y nosotros mismos , dice,
51710
"‘—__———_———_—_——_
(a) Serm. 294,. al. r4, de Verb. Apost. cap. 2 r. (b) Serm. r 3 r.
al. a. de Verb. Apost. cap. 1o.
de los
unonoi atreveriamo: Santos’ Padres.
a aïsegurarlo‘, si no estuvieramo:
101apa
02'
102 Defensa de laTradicion,
“lo primero , que es muy distinto examinar despues
ande algunos particulares , y examinar. despues de la
aaIglesia. Lo segundo ., que si la Señora de Duras es- '
ntá obligada a inquirir despues deu su Iglesia , que la
“enseña , que ella , y todos sus Synodos pueden‘ en
ssgañarse, y que puede acontecer que ella sola ‘entien
nda mejor la. palabra de Dios , que todo el resto de
“la Iglesia junta , como M. Claudio le havia enseña
ndo , no se sigue por esto que la Iglesia sea falible en
518i , ni que se necesite examinar despues de ella , sino
saque solo deben hacer este examen los que dudan de
nla autoridad infalible de la Iglesia. Lo tercero , los
erGatholicos no pretenden que _no es menester valerse
nde su razon ; porque ‘se necesita para entender que
3:55 ‘necesario someterse a la Iglesia. Un loco nunca lo
“entenderá; pero aunque se-necesite ,- no se sigue por
uesto , que la discúsion de- este punto sea‘ dificil , o in
artrincada-como la de otros puntos. Por poca razon
saque se tenga , se tiene bastante para ver queun par
vatiClllflï no debe ser tan temerario , que crearentiende
umejor la palabra de Dios,'que toda‘, lalglesia. Lo
nquarto es, porque Dios-‘nos envía a la autoridad '
srcomo a una cosa facil , en lugar queladiscusion por:
91135 Santas Escrituras es infinita, como la experiencia
n10" manifiesta. Lo quinto,’ quando la Iglesia propone
“someterse sin‘ examen a su- autoridad , no hace otra
I I '
MCOSQ que segur-r la praétrca de los Apostoles. En la
nprimera question que se suscitóen la Iglesia, pronun
ucró diciendo : Ha parecido bien al Espíritu Santo y a
a-ÏZOJÜÍÏOÍ- (a)_Averí'gu_ar despues de esto ,_sería exami
I A sanar
-a» en v s v: wr
Afsiy de los Santos Patines. 71 o 3
— ¿nar despues degEspiritti‘ Santo‘. ‘Iiaïinveetigacion se
“hizo en el Concilio de los Apostolesï, ïdespuesno
- “queda lugar a los Fieles para el examen : Pablo y Sí:
70135 corrieron las Ciudades Jnseñanzfoles a observar
asÍO gue se havia juzgado por 1o.: Apostoglés , y Pre:
‘a5bjter0ide Jérilsaléiz.’ (a) Los que “no ‘están en‘ la Igle
usia deben examinar‘, y esto hacían 10's ‘de'Berea;-pe
nro a los que están en la Iglesia , el= Concilio. de los
MAPOSÍOlGS les hace ver , que no hay lugar al examen
aadespires de. su decision. Nosotros hemos aprendido
‘nporeste’ primer Concilio a celebra-r Concilios para
¡»definir las ‘questiones que se suscitan éu ‘la Iglesia.
asDebemos enseñar quál es la autoridad de los Conci
éslíOS por donde hemosaprendido a tener los _rnis
nmosuConcilios. Mas‘: una palabra de San Agustín:
¿’Qzïierz esta’ fuera de la ‘flglesia ni vémz’ oye ; quien está
ise/i lalglesiai, ¡zi es sordo , m’ ciego. l‘ (b)
Se Vé pues claramente , que nuestro Critico nada
tiene de cierto en susmáximas. Yá quiere que se re
mi.ta,noi ala Iglesia; si-n_0_ á la Escritura como mas
clara : yá remite de «la Escritura á la Tradicion como
mas‘ cierta; Lai-autoridad‘ de los Concilios no esmas
sagrada que las otras ;. todo seencamina a la indife,
rencia , no hay‘ autoridad en la Iglesia , nien sus Tra
díciones/ No obstante la Tradicion , las opiniones
particulares de San Agustín han prevalecido en el
Occidente: la Iglesia ha variado la Fé de la abso
hitanecesídad de la Eucharistía ; en una palabra,
en el juicio de nuestro Critico nada hay real en
estas palabras de Tradicion , y autoridad, sino que
' ‘ son
-—____._______________________
(a) Ibid. 16. v. 4. (b) Enarr. in Ps. 4.7. '
'1 04 ; Defensa de la Tradicion,
son termines de que se sirve , seguq que necesita para
ocultar sus secretos designios.
CAPITULO XX.
l‘
r
_r yde losSantosiPadres. .109‘
e . . .. cAPITiiLOI-xxir.
Que‘ ely/método deM Simon, no dexa ‘medio alguno para
5- establecer 1a seguridad de la Fé¿ y todo lo abandona ¿z —.
f- '. -' — la indiferencia. - i
10
110 Defensa de la Tradicion,
tico ', que se havia servido de él para embarazar los
caminos de la salvacíon , destruye tambien la autorí
dad de la Iglesia , haciendo ver que ha variado en su
creencia. Un entendimiento vacílante no halla tam
poco refuerzo alguno en las decisiones de los Conci
lios , pues dice que San Agustín no estaba obligado
al Niceno. Asi , siguiendo esta guía , se perecerá in
falíblemente. (a) '
Es un medio para fixar la ínterpretacion de las
Escrituras emplear ciertos terminos consagrados por
la autoridad de la Iglesia , como el de consubstancial
establecido en el Concilio Níceno contra las sofiste
rías delos Arríanos. Pero M. Simon procura tam
bien usurparnos este refugio , numerando estos termi
nos así añadidos al texto de la Escritura , entre estas
consequencias humanas que ha reprobado. Estas son
sus palabras en ellugar ‘que: hemos muchas veces
citado , aunque para otros fines: Los Arrianos oponian
por su parte a ‘los Catholicos ,' que havinn introducido en
la Religion palabras que denínguna manera- estaban en
los libros Sagrados : San Atbanasio. probó al contrario,
que los Arrianos lzavian inventado mayor numero de ellas;
de suerte , que de una otra parte se apoyaba no sola
mente sobre pasages formales de la Biblia , sino tambierí
sobre lasíconsequencías que se. dedutian de ella : (b) es de‘
cír ', como se acaba de ver , no solamente sobre la pa
labra de Dios esino sobre la Dialeétíca‘ y sobre dis
cursos. Así cada ¡Secta tenía sus terminos consagra
dos para fixar su Relígíon : los Catholicos los tenían:
los
1'?
1 r2 Defensa de la Tradición,
ponderado. Lo confieso : pero no se puede hacer todo
de una vez , y ha sido necesario empezar manifestan
do este veneno sutil , que se tragariaisin pensar en las
perniciosas obras de M. Simon. Demos gracias a Dios,
que sus artificios sean a, lo menos conocidos. Por este
medio los sencillos estarán alerta , y los Dofiores
atentos a repeler el veneno.
-' " r 113
Zaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
ZIBRO TERCERO.
M. Simon partidario yfavoreccdor de los
Socinianos, y al mismo tiempo enemigo de
toda la Theología , y de las Tradí—
- ciones Christianas.
oaPITULo_L
E1150 discurso del Autor sobre la Predestinacíon de Jesu
C/zrísza: su afeélacion en buscar apoyo a la doélrina Soci
_ Iliana en San Agustín, en Santo Tlzoma’; , en los Inter
pretes Latina: , y aun eu la Vulgata.
. z lr‘ _, ,_ n,
un
1 1 l
m Í. - r
- ¡ ,__¡____¡_" — ¡ ¡ ¡ r _ m . ,
Í ‘¡wi u,
A
' \
‘ha.
OIW
What:
¡nur-
_ bno.
f]; 2 l .
mismo; executa
. r uï-bïovjbdooés ' respeéto de:
gzy: previendo, otros‘ =.S,€Ü¡CjmÍ€i_
lahreprebensión- que
le irariansusí Izeétbres‘ ; refiere; bmsp Erefacio, (aytres
razones {aaraiescirsarse-zde eliaLlja primerages ¿que
esto‘ pertencceh «shxasurltogz» ¿Porrquéshgflaviaisfiemg
préndidór formar un» cátalogoide-üas ) heregías 22cm
oreeiqnobligado» s» ‘dadas ‘atluz; póíqaei estpsaimpíbs
prefirieron? sus’ blhsfemias explicando_ luv-Escritura?
Con este pretexto se..podrái tratardetodas iasi-trapzoi
los‘ AteosTy: ‘Libertisrosikofltra’ lathpresciene
cía aieüDiosg contraen; inmensidad. Ty providenciá,
su jústicitu-que castigalelrÏpecado-con fuego
eterno, y contra los demás atributossin responder a
ellas’; porque a * todo han acometido llosvsocinianoá
etxpiicandotia Escrituras: La segunda rrazonr Sdeanuesv
troïgáiutot es ,vrque-'lodrPacireflse han servidozcorr anti:
lidad‘dejalgfrnost buenesípeasamieutos gaquerrse hallan
errlasjobras de’ los ‘Hereges; Que nos manifieste qué
provecho se puede sacar de la deduccion alargado‘ ‘los
argumentos de Scrveto , y que determine un lugar so
lo de donde podamos recoger alguna utilidadPero fi
nalmente , dice nuestro Critico , y es la ultima ra
zon , los escritos de los Novadores sirven contra ellos
mismos. Lo confieso ; y de aquí concluyo , que si no
se saca esta ventaja de ellos , en lo que no piensa M.
-10 9 gs “¡Sí
(a) Pref. _ _: ‘L. v;
¿y ‘dle loslSantos Padres? m;
l Simon , segun
mejantes’ lo que
Autores , endice —de Serveto
lugar , y deÏotros‘
de combatirlesigilseles
r (a) Pas- 8640 .098 4ta": te) 4+8 y ups .323 (L)
v1- 26 Defensïddeïla-Trádicíon,
en las de Brenio , quiensin’ elauxil-io de Socinoy sus?
explicaciones‘ muy sutiles-algunas vecesyy como-trahi-E
das por‘ r-los cabellos .,: perseverar siempre “un perfeéto‘
Anti-Trinjtaciocgfiué noïdeben los ¿Socinianos ‘gáfílasi’
precauciones det — Simon ‘, que enseñar’tan. ¡buenos
medios para suplir el dcfeétdde su mismo Maestro,
quando le falta la eficacia? 3“ _ ,1’- r -*‘= - ‘ A '-‘ l
"erÁrrTULo vn.
r M, Simon se maravilla vanamente de los-progresos de la
Seria Sociniana. _
. ' i-Í ' « L e ' J
CAPÍTULO VIII.
‘Dixuqva partida Mlïíinangguíen dice no escribe irían
r * . para 103 ¡aívios a-Quáles son la; sabio: para quie- ,_; y
ver escribe.
CA PITUL O IX.
- Recomendacion de '14: ¿interpretaciones del ociniano
-. ' C're1io._ -‘
3 Qué fin se encaminan los elogios que nuestro
- ‘Autor dé: aLCrelio? Propone primer-paque
' llos por los quales Grocío , el mas excelente de
(Somentadores *-en-rti—eoncepto“"de‘”M7“5í*
. ' pa,‘ .'(_.-u .134) mun)
1 34. Digfensa dela Tradicion,
mon) ensalza (a) a este Unitario,que a; él mismo lefor
zaron a entrar‘ en las explicaciones Socínianas. Veis
aquí yá una ¿gran ventaja para Crelio : mas adelante '
no se oye hablara M. Simon sino de la gran reputa
cion , de la discrecion , de la acertada eleccíon , de la
adhesion al sentido literal que se encuentra en este
.Autor , que juntamente es Gramatico i, Fílosqfo y
Tlzeologo , y sin embargo no se estiende mucho; (b) es de’
cir , que todo se encuentra en él, yá sea en el fondo,
yá sea en el.modo , junto con la brevedad, que es e}
mayor atraftivo en los escritos que se representan
tan llenos; Es ‘todo lo que se’ puede desear para leer’
les; y. para disponera. creérle , no havia mayor ‘em
peño que ‘decir , no solo que sigue casi siempre su asun
to por el camino mas áreve, sino tamlyíen gue sin detener
se en examinar ‘las diversas interpretaciones de otros Co‘
mentadores , nadavlvidapara fundar las opiniones de los
de su Seïia ; lo gue executa‘ prosigue nuestro Autor,
con tanta sutileza , que aun en los lugares donde cae en
el error , parece que nadaj dice por si ïmismo. (c) ¿Des
pues de_estov,r-qtié‘pretendeís M. Simon? Haveis heri
do mortalmente a los enfermos :decidles ahora loque
quisiereis , que el Sociníanismo es nuevo, que es odio
s0 , siempre quedará vuestro Lector impresionado de
la idea que le haveis dado de las explicaciones de esta
Sefla’. Lo. que se. desprecia ‘en ella es la violencia que
hace ‘a la Escritura , y a. laidea universal del Chris
tianismo; pero quitais este horror , haciendo ver las
interpretaciones de Crelio tan naturales , tan convin
centes , que se creerán como nacidas por sí mismas de
y , la
i ‘ ,
,‘,’..i') x . _ i, . .. 2.,‘
r ¡,5 .- .. .a-l-_
.2
.,o\ ¿[Lap
_ ‘ ,
r 1 t ' r ¡_ ,_ . a g .
\ l t - )' \ltl u o» J ¡.4 ÁI.¡¡f\l_-'ll(x?
i 1 v- -\_
- I . t ,1 :0,‘ . L ,. .' :
CA
~
"_-_
g-r-nm.
CAPITULO m.
Sumo estudio en re_fe'rir— lo ridículo de Pïilzogo Socinianoï,
" acerca del Infierno. '
r
s
. cArrrULo x111.
e ' A _ ' - . ‘
/
14.2 Dcfinsa de 7a Tradícion,
curar en otra ocasion. (a) Mientras tanto tendremos
todo el veneno de la Secta —, esperando que M. Simon
podra’ en adelante no contradecir , ni convencer , por
que‘ esto sería declararse demasiado , sino examinar
mas a fondo las razones , con la: que sostienen sus ¡zoveda
des : dandoles en esto tanta esperanza como alos Ca
tholicos. De nada sirve el termino de novedades con
que sev califican sus opiniones , porque se dice lo inisá
mo de las de San Agustín, sin que por eso se preten
v
ll
a
dan proponer como dignas de condenacion : y tene-.
mos motivo para temer , que si lo que ha dicho M.
Simon’ es malo , lo que promete será peor.
I
\ _
CAÉITULO XIV.
Todo» el caraéler del libro de M. Simon inspira libertinage
jy desprecio de‘ la T¡teología , la que procura siempre
. ' *' oponer a la simplicidad de 1a_ Escritura.
(a) Pag. 29 I.
——~
t-“i
| n. , A
¿ de los Santos Padres. r 49
pasages esmenester considerar al Hijo no como Dios:
o comoflombre. ¡sinocomovel enviado del Padre para
anunciar fi los hombres la nueva Ley. (a) No. es esta la.
solucion, es el nudo y la dificultad propia que se de-i
beresolver, 'y‘que; losP-adrcs querían declarar. . Se
trataba ,.digo-,— de explicarmo que Jesu-Christo fue
se el enviado de su Padre , sinocomo siendo su en
viado , era al._ mismo. ‘tiempo su igual; Los Profetas
eran j enviados ;..ys asi como Jesu-Christo era envia
do , segun la resolucion‘ de BL Simon; para‘ anunciar
a losfihombres lanueva- Ley ,'.M0ysés era enviado pa
ra anunciarles ¿la Ley antigua ; pero Moysés no decía
por esto : Asi como el Padre tiene la vida en si, asi tam
bien dió al-_Hijo_ tener la ¿vida en si : mas , todo lo que iza
ce el Panic ,10: hace delmiszno modo el Hijo , -y con igual
perfecciQn :—- mas ,. todo lo que es vuestro es mio , y todo
lo que es mio es vuestro : y finalmente , Yo , y mi Padre
somos una misma cosa. Era necesario distinguir el en
viarlo que hablabaasi , y que se igualaba a Dios en su
naturaleza comosu Hijo Unico, y propiamente dicho,
de los otros enviados‘, y del ¡nismo Moysés , que ha.
blaban como simples-siervos. ; Esto hicieron perfeéta
mente los Padres , diciendo que el Hijo de Dios sa
liendo-delseno paternal ¿para venir a los hombres , es
enviado con el mismo título «de Hijo ; de suerte, que
su -mision no tiene otro fundamento , ni otro origen
que sunacimiento eterno... Este es el principio delos
¿Padres para: explicar lo singular de la mision de Je
su-Bhjristo , y por;el mismo principio; declararon co
mo eSaDios , ycomo al mismo tiempo lo recibe todo.
(a) P219273.‘ ‘
y .
tu
O
y de 70s Santos Padres. 1 57
de este Príncipe de la Escuela. Para ser buen Theolo
go al gusto de M. Simon era menester despreciar co
mo él a San Agustín , abandonarle principalmente so
bre la Epístola a los Romanos , y sobre esta profun
da doctrina de la Gracia y de la Predestinacion, que
destierra el orgullo humano; esto es lo que repite
muchas veces M. Simon : era necesario finalmente
empezar asegurando que Jesu-Christo , que es la Ca
beza y modelo de los predestinados , no fue predesti—
nado ; es decir , que el Mysterio de la Encarnacion
no fue previsto, determinado , preordinado , ni pre
destinado de Dios_;1o que no solamente es una im.
piedad , sino tambien un absurdo manifiesto , como
queda dicho.
CAPITULO XVIII.
Híxtoríetadel Doéïar Espema ponderada malícíommentc
por el Autor , para reprelzender á Roma , y despre.
cial‘ de nuevo la Tlzeologia como induüi
va á error.
«L, - <4
(a? Bag. 593.
1 ¿‘8 Defiensa dela Tradicion,
que ni el discurso de este Gentíl-Hombre , ní la rela
cion 'de Espensa sirven de nada á la Critíca,como
no sea a la de los bufones,que se abandonan al espi
ritu burlesco tan reprobado en la Escritura , sin per _ _ ._Ñ— _
CAPITULO XIX.
1 62 Defensa de la Tradición,
es no solamente del mismo adorno, sino tambien de
la misma fuerza y sentido que lo que dixeron ellos.
Pero la—ultima nota , por la qual M. Simon pretende
establecer, que yá no se piensa en saber lo que se lee
en los Santos Padres , porque no convienen‘ entre si , es
el lugar donde hay mayor veneno; porque es insi
nuar , es definir en general, que nada hay cierto que
producir de la doctrina de los Padres , y especialmen
te que en orden á la primacía de San Pedro , de que
se trataba ‘en este lugar , los Padres no convienen que
se halle en la Escritura. '
Se conoce pues, que todos los golpes deM. Si
mon contra la Theología Escolastica se encamínan
mas adelante, y queel contra golpe ‘recae sobre la
Theología de losPadres. En efecto , segun sus xríaxi—
mast-no esïnenester yá Theología , todo se reducirá a
la critica :» ella sola _dá el sentido literal; porqué sin
añadir nada alos terminos de laEscritura para cono
cer el espíritu de ella ¿se aplica unicamente a exami-—
nar ‘los termines: todo .10 demás es theologico , es
decir, poco literal , y nada admisible;
y ‘(le los Santos Padres. I 63
CAPITULO XX.
atrevida critica de Erasmo sobre San Agustín , sostenida
por M Simon. prosigue el desprecio de Santo Tllama’;
por este Critico : presuncion , que como a Erasmo le inspi
ran las letras humanas : ignora radicalmente lo que es
la Escolastica , y la vitupera siendo incapáz de
w , conocer su utilidad. _ r
o _ ‘. f
. V g . _ ‘
—1 68 Defensa de la Tradicíon,‘
rita’ Santo es alguna cosa‘ subsistente’ y coeterha á
Dios. Se podría aprender tambien enellas, que los
lugares donde Jesu-Chrísto se llama Dios‘, son ‘mas
bien modos de hablar inventados para ensalzar aJesug
Chrísto ¿que palabras’ que se-deban tomarlíteralmen
te. A,»lo—¡ menos-no olvida Grocio -algun lugar-de to;
antiguos por donde sevpueda embrollar esta materia,‘
sin que se pueda hallar en él una clara resolucion
de esta-question.- L0 que se podía demostrar- si fue
ra‘ este flsu-ziugflr- Y‘ ¿Si alabar estas disertaciones en
mIsAutor; Si? quien Se-díce índefinidamentezqrle pre
domina el fue" Sentido , y ‘a quien se dá la gloria de
[layer iluminado
mente la T¡teología
inducir los simples adeerrar
los antiguos , es no 501;.
,1 sino tambien ten-I
der lazos a los que no están bien instruidos‘ \ ,
-r.>. WcAPrTULo XXII.
-,- ' - - r ' , i
i. -‘ . . , , y .,
'- I.Autor_ entra en las opiniones i/npias de Socino , Epis
‘r copio Grocio, para aniquilar 1a prueba de la Religion...
7:“ f3 ,2 ;;.. u‘ .4 por las profecías. ' «¡.21
5, - ' ..
‘x = Ntre estas disertaciones de Grocio , aplaudidas y
‘= -- ' aprobadas ele-M. Simon , debe numerarse una‘,
iiondehgblando de; los pasages del viejo Testamento,
de‘ que; ¿e valen los Evangelistasy Escritores sagra
dos‘, pretende como refiere M. Simon : Que los Apos
toles» no intentaron convencer a los Judíos , que Jesu-Clzris
ttreflarelvardadero Mesías apor; solas estas autoridades,
porquéilzaypocas’, dicelGrocio,,que semejïerm aestéefiri,
ya: contentan con probar la mision de Jesu-Clzristo por su
relsïlrétcion y sus milagros.‘ Veisaqui efevftivamerítrïel
, .. P“,
.3: ry de losde Santos
primer sentimiento Grocioá PaÏí/ei‘. ¡’69M.
quien Calovió,dice
c} y de losïSantos.Paclres. r7 1
los ‘rïtfos ¡{que ienquánto s Joaaïmáoensefña claramem
«e. laïsïnaifereneyíá de ¿‘Religiones yhace del creerme
mo ruurespejcié deFilosofia- poco 'necesaria._ para la
salud." Semejante hombre {que tan pocointerésftie
ne‘ por la’ Rfeïligïonchrisfiana ,— no haviaxde moverse
de¿'las.‘l?rófe‘cias— , y que‘ hacen lagloria de ella tam
bién como —el fundamento.’ Veis aqiii‘ efectivamente
lo que piensa de ellas por relacion de M. Simon : Exa
minaydiee ï este Critico‘ ,—las Profecías , ¿y los otros po
slérges delfestalménto Viejogyue se refieren’-' en el sNuevo , y
69m0‘ la mayor parte ‘se-‘ciran- en ¿{por forma de alegoría-s;
no puede sufrirlla opinioizïde aïáellosï ‘que’ ' creían que’ los
Evangelistas y- los-Ápostoleremplearon e-srasedlegoriaspa-‘r
ra’:probar que Jesu-Ghrisro "era-el Mesías‘; lo que es, dial
ce ,"corrvtrario_'_a_l-"buén ‘sienïido-¿ï-y ‘aun all pensamientol ab
agudos nue primeramente ¿e sirvieron de-festos-sentiddx
mysticos’; Seüontentaron de losÍmilagros, y de laiResu-ï
reccion de Jesu-‘Christo para probar á los "Fieles que era el
Mesías’ _, habiendo propuesto este modo de interpretar a los:
_ gue le havianreconocido. (a) " "' r P“ “í 5 ' 1-"
l‘ -Veis aquí pues de dondenos havenido el despred
cio delas Profecías. » Fausto Socino empezóa‘ debili
tarlas ; Episcopio les‘ ha quitado toda su fuerza‘ ¿has-J
ta no poder sufrir , dice M. Simon , que se les hiciese
servir de pruebas : Grocio ha copiado a Episcopio, y
ha procurado establecer su opinion en todas sus no
tas ,-y M. Simon sigue la misma ruta ., el modo de
responder a Episcopio manífiesta su corazon. Porque
despues de haver declarado que este Autor no puede
sufrir__la prueba de las Profecías , en lugar de confun
"" l Yz dir
(a). 1-Pagé8eui-
.._.._
‘ . I - .' , ‘ ;¿-._= .:.c-- n" i»)
'1 72 Defensa de la Tradicion,
dir su impiedadconnrigorgsolole opone M. Simon
esta debil defensa zrPerogarece que una buena parte de
esta: autoridades del Testamento Viejo podían tambien Iza
cer alguna impresion sobre el entendimiento de los mismos
Judíos, que aun no estaban convertidos , viendo que sus
Doctores las ízavian tambien aplicado al,Mesias. (a) ‘Así
acostumbra fortificar los argumentos de los Socinia
nos , alos que no responde sino temblando: Parece,
dice (no sabe nada) que una buena parte de _esto_s pa
sages( no dice que es la mas grande,)podia, ¡racer , no
r una fuerte ímpresion , sino alguna inrpresion. (b) ¿Pero
podrán acaso hacer á lo menos esta impresion tal:
qual por la fuerza misma de los pasages? de ningu
na manera. Es porquelos Doctores Judíos aplican
dolessa otros , les han aplicado tambien al Mesias,
¡Qué bello rcfuerzopara elpEvangelio I Toda la fuer-,
za- de las Profecías consiste en hacer acaso alguna im
presion sobre los Judíos, no por las mismas palabras,
sino porque sus Doétores les havrán explicado en dos
sentidos,yuno de ellos havrán aplicado al Mesías,
sin ser forzados por el Texto, como si el Espíritu‘
Santo
.
huviera temido hablar clarisimamente por si
MISMO. .
I . . .' ' ..
- o . . . .¡
.1 f "‘ . . -», ' . » - —D
n‘ e. . . .. I. .1] . _._.r,,n. _-_ _ « '_
' CA
._____mmm______—
’rl
lk
l ",. yCAPITULO XXIII.
de los Santos Padres. r 73
Tertulíano
Christiana , en la, otro famosb
Ápoüïgia qu}?defensor dela Relígíon
cliÁrïgéáïSenado , y E:
otros Gefes del Imperio Romano , excluyó como San
Justino toda sospecha de" ‘ligereza de .1: ‘creencia’ de
los Christjanos , porque dice , que ‘está’ fundízda sóbre
lo: antiguos monumeritoïrde llReIígíoríJiedaíca ; que esta
prueba¡lbs
jnínos fuese
que’demostratíva lo convenció
oyerorí álestoiPrïbfctdí en estos
hallarbh ter_
áÍDid};
los que procuraron entenderle: fueron olílígadó’: filial ¡tú
dueriízt intelligere {cogentur ÜcrederL-(c) e No ¡es esta
únagconjetura , sino una-pruebaïqúe convence ¡cogen!
cu»; lo que confirma diciendo ‘en: otra parte: “noso
mtros probamos por ‘fechas ,po_r ‘señales que prece
MÓÍCIOD. , por los efeüos que se han seguido , todo
antstá tcumplido‘, tbdóestá- claro)“. NÉÏSÓÜ‘ alegó
rías ",-, ni ¡’mbïguedacies :< no’ emm pequeño nume
v . ‘rr :;'-_ ',;.
A
.‘ r0
rx
- ' ' ' ' v .
(a) Disert. sobr. Grocio. Pag. 9.; 9. Just. Apoiog. 0.. (b) Se ha
"lla en la Dmrmbï“ GrocvPag.» QfQFTSÏgJÍWWWÍWÍ
brevemente. (c) Tcflül- Ayologqdyersdugim 8.23164»;
-' L. ‘y de IosSdntosPadreÏsÍ ¡‘77
-ro de pasages, es una sequela de cosas , y predio.
‘ciones que demuestran la verdad. , '
z . Orígenes (a) en su libro contra Celso , que es otra
excelente apología de la Religíon Christiana , añade a
las pruebas de los otros sus propias disputas , donde
cerró la boca a los- contradíétores; y ‘responde paso
a paso a los efugíos de los Judíos , que enseñaban en
sentido contrario las profecías «que los Chrístianos
aplicaban a wjesu-Christo. Porllo que -.mira a nosotros
probamos‘, continúa, defnostramos , que aquel en quien
creemos ha sido profetizado , y nada tienen que responder
á esta. prueba ni Celso , ni losGentiles , ni los Judíos. (b)
m. . n u)‘ ’ _ ,, ' ,..,_-.'..l‘)
‘a3, 1-.¡.,...;.:.;3.* +3 t
' =a ' Lili. l} a .¿‘ .. ‘a.’
a 3.1’.i .
e 8..86.I.ib.:. a 11-5473 mi
_ r
‘
'
.
y ¿le los Santos Padres. 17-9
dar que la Fe de la certidumbre delas profecías , ‘y
de la determinacion delverdndero sentido de ellas
acia Jesu-Cluisto , segun lasintencion recta y ‘primiti
va del Espíritu Santo , no seas la Fe de ‘toda, la Iglesia
Catholica. _ ' ' .- - J: , ,_ ' .. zgtug-z,
Vease entercerulugar está Féuen la prueba; eo
que se ‘rita sostenido. contra Marcionrpy OÍIOSÍHCIG
ges la autenticidad del antiguo. Testamento. Desde el
origen del Christianismoiesfconfundia San Irenéo
por las profecías de ¿Ïesu-Christo ,=.- que se. hallaban en’
todos‘. los. ‘libros aqueï componían rla antigua. alianza.
Gonsistia suprueba, en que no era. casual que tantos.
Przfetas huviesen concurrido ¿pronosticar deJesu-Clzristo
lasmisrnas cosas , y mua/zo menos que Jzuvieren podido ha’:
cer. guezestas predicciones se cumpliesen en supersonas, no
reníendaydiee; alguna de los, antiguos’, ni de-loszlleydsï
ni’ en una palabra , ninguno sino nuestro Señor, en quien
se lzuviesen verificado. (a) ; ' j -..z
¿.5
(u caÏrïLs-crifLdoexxvél. '
e. - ,' .z. J ¿‘s . JQHÏ ¿‘Si Li 5', LL". '. "
Loslllarcionistas han sido los p incipales Autores de l;
docïrína deEpiscopio y de Grocio , que reducian la con
viccían dela Fé en Jesu-Christo a los nzilagros solos,
excluyendo las profecías. Pasage notable de
Tertuliano.
L
¿;_¡g
1 . :- 1-
“t ,
1
U
‘ '
n; 1.4.2.4.3
4.3!:.
'
,
a‘
.
-__._.._.t.. V .. ..
l
_
:-
"‘
:r.
.
_ AJ! a .:,—
z
;
...— .- u: .- '
_
_
:,;.....« :.v
,
' ,
‘s: pr. 22- v_—,..7;:::
-
'- "LL .1»
.
’¿
3
, tu
"‘—'
. 15,3_ -.»i;:.;,.¡r¡
t...
_*.- l
«
. l
a
_. ' ‘
cíuzlüfl
—..
(m)
-
‘:1'Ï¡_'"._
l' e
4.114.
nl’;
,_.V,.,_M_..
s’.
'
cnrlljl?
24.1.23 ¿Ig-ni
CA. .
y‘;
Ill!
l I 82 Difensïaïzïe láÏTracïicion,
(ÏA P IT U L 0.3 X XVI H.
tiempos. -
. Perolo mas notable es , que Orígenes y los otros
Padresïleclarabang que si‘ entraban en la prueba de"
las ptofeciaspara establecer la fuerza"invencible ede
ellas , era siguiendo el Mandamiento de nuestro Se
ñor : escudri/iad las santas Escrituras. (a) Era imitando.
a los Apostoles, que se han servido deülas profecías;
para pruebas formales , rebatiendo todas. las sofisterias
y objeciones sie-los Judíos; de modo que negar la?‘
fuerza de esta-prueba .e's renunciar al espirítu»,»que»to-¡
da la Iglesiauhát; recibido. desde su origen deJesua‘
Christo , y dÜSIHQDÍSCÍPUÏOSo ' tu“; L‘
-.:;. .t ,s. xao. ‘.' -l=,-.-":’. u.
CA—PIT,U.I¿O= XXIXA .1
n
Prosigue la Tradicioncde la fuerza delas profecías: con
¿clusion de «este eaiomen ,, rdescnbriendo- siete articulo: -‘
(a en M. Simon ¡donde raxruina-ñenteramente l "¿-2
. Tradition. ' -¿ ‘
rc
— 1
' SI la Iglesia nació cu. estos principios ,- si se edífir
có sobre este fundamento,’- tambien se ‘conservaï
por el mismo medio; Todoj ‘está lleno en la-antigfiief
dad, no digoyo de pasagct,» sino‘ de irratadosfdré
¡nados a proposito para sostenerïla- prueba de ‘lasïpro-f '
fecias , como ‘invencible y demostrativa-zïTestigo eseei“
libro.’ de Eusebio, que«se— ¡‘ati-tula ¿Dándstr-acion imán‘
gelíca , (b) y que solo esiunéntretexidoideprofeü
cias; y el admirable discurso de San Athanasio , don
-— - de
í (a) Ibiei. 3. Joan. V. 39- AÓÏ.r 2631.26. (b) '9rat.u.“j
r . a
‘- .
e . l
, ,' ‘ ‘y :. r
..:,_¿¿__: __, .' i, _}q «. -.¡..-¿_.V (r. -. L .' 'l| . . s?’
ramos émzionfl E...l' o?) e:‘.t.52' '>' --'.Í <-Í iia"
n}. olvimoxs é em: un e57‘ wí. ':‘."." "1 '--' r if 39' u-ÏÏ ‘h!
—""'.—'\. un iv. La” zuyzí‘! . —' W =.- '- .3.‘ N” 1
zw,p 2mm ."..m‘.‘_ A y. V» '. ‘A’;- ïlïïvtx a 1-.
'.v'-'.'=,\r.k.s.\.i‘.1:r.sisrernzvinnlg? '\:.I.-.‘x'-!;n v} així-MI‘:
. t Í‘. .3. maíz .
{svÏzlïsïswfliïi 3g‘.
¡‘N rszïÏVi, ci ¿,87
desearleseeïseïenaaïsessweraaïeaaaïeflr.
"~ tiene nvdnrn**~?
«Simon enemigo y censor temerario de
‘ ' " ' los‘ SarrtosPadres. _ ‘ '
"" ‘i CÁPÏÍTULO‘ '_I.
Simon procuraroponel‘ Io: Padres a los sentimientos de
la IgIesÍiaQÍPasage obvio y de ‘San Geronymo que realzïaeug
riosamentge la mala Fé contra el Episcopado; asimismo _
¿gl _ otros pasages vulgares» del Diacono »Hi1ario,
5 :
,7__;’_,__¿ydePelagio.¿ y - —il¿
"I:
1 90 Dfirzm de la Tradicion,
CAPITULO rr
El Critico hace á San Juan Cltrisostomo Nestariano: ..Pdg
saga famoso de este Padre en lalilrarprilírtv ‘tercemmbre la
Epístola ¿z lorHebreos, , dondeJil. nSimoÍn sigue unorTraá
duccion , que Iza sido retrzztada como iryïel por el Tra-r
dañar de San Chrisostomo, ylecondenada por el .
_ -- _ . .‘. . Arzobispo de París. . A .1
WÏMÍ i"' AV i‘
.,: A'—infeliz inclinacion de nuestro Críticoiades
acreditar la» doctrina y la Tradicion de la Igle
sia , le lleva no solamente a referir "sin necesidad un
‘famoso pasage de San’ Chrisostomo en la tercera Ho
milía sobre la Epistolaïa los Hebreos , (a) donde-pro
cura hacernos. creer. que favorecía la heregiade Nes-_
torio, sino tambien ‘a darle el peor sentido que es po
-s-ible , haciendole hablar de Jesu-Chrístovcomo si Int
«viera reconocido en éldospvBersonas, (b) Era estadna ex
presion formalmente heretíca; pero temiendo se ad
rvirtieseiclaramenteenr ‘este pasageïel Autor que ín
fielmetate le. traduce , ‘despues de haverla referido con
¿yinúmdezeste modo: -Nest0rio nouhavria podido hablar
viario claramente de dos Personas de Jesu-C/zrim) , que fui.»
¿»corresponderá dos tnaturalezas. Veis aquí‘ puesasaa
Juan Chrisostomo, por decirlo ásí,-tan Nestoriano
como el ¡mismo Ncstorio, y para ínsinuar la razon
por qué ‘este Padre .-asi como Nestoria havia puesto
¿dos personastcn Jesu-Christo , añadeínmediatamente
el Autor: Que quando las Serílarios de Nestoria-ie opusie.
i: '- l ran
—"___T¡_—__‘_—'___—
- a 92 Defizn’22z'de'Za"Tr2zL-i‘ïcí01z,‘
sostomo , que havia publicado ‘la misma Traduccion .
del pasage de este Padre , que nuestro Autor ha se
guido , se harxetratadoiconuna ‘humildad que haediv
ficado toda la Iglesia. Porque no contento de haver
declarado por un escrito. públïcogquessu Traduetion,
que es la que sigue M. Simon , era infiel, ha pedido
perdon a su Ilustre Arzobispo , y al Público , de ha
‘¡ver ¡lecho de San Juan Chrisostomo un Nestoríano,
¿y de haverle. dado palabeas ,' que le ímplicaban ¿n un
error que ¡amásise havia de ,él sospechado. En este
mismo escritmaprovechandose de las luces de su Pre
ilado, haureprobado su Traduccion por razones inveu
cibles ;_ alas quaies se podrían añadir otras ;.al mismo
tiempovpropxxsola verdadera y literal Traduccion de
su texto ., que un sábio Prelado, y todo el Público
han autorizado. La question está juzgada con cono.
cimiento de causa ,' y solo M. Simon insiste en su 31'1
.rpr;, siuquerer- aprovecharse de este exemplo.. H r í_
-=:. ».—, .- r.
‘__'{' CAPITULO III.
CA?
(a) Concil. ‘Ephw Adior. 2. Co ncil, ;.v Colleá. 4. s.
(b) Ibid. < .1 . - a __
y de los Santos Padres. I 9 g.
CAPITULO IV. a
I 96 ¿Defensa de ¡a Tradicion‘,
Jesu-Chrísto Dios impropiamente , abusivamente (a) en
el ‘mismo sentido que Moysés se llamaba Dios de
Faraon. Tenemos otro extracto del mismo Escritor
en Facundo , donde dice que Jesu-Christo era Hijo
de Dios por gracia y por allopcion, (b) y no por natu
raleza, pero este no es el lenguage de San Juan
Chrysostomo : su lenguage es muy contrario , que la
union de Dios y del hombre en Jesu-Christo era
substancial , que no son sino una misma cosa , no por
confusion o mutacion de naturaleza , (c) sino por una
‘unidad inefable. No es pues- esta union de afección,
o de voluntad , que facilmente se conoce , porque se
halla en todos los Santos , sino unica y singular,que
hace que sin conjizsion , m’ dioision no sea Jesu-C/zristo sino
un solo Dios , y un solo C/zristo , que es Hijo de Dios ;pe
‘ro Hijo de Dios, dice este Padre , no por adopcíon , y
por gracia: (d) que era, como se ha visto,el propio len
guage de Teodoro de Mopsueste; porque aquellos,
dice San Chrysostomo , que danrla adopcion a Jesu
Christo se igualar: ellos mis/nos á él en calidad de hijos
de Dios. (e) Nada hay mas opuesto que el lenguage
de San Chrysostomo , y el de Teodoro : lo mismo se
debe decir de Nestorio, quien sigue a Teodoro en to
do, siendo una manifiesta calumnia atribuir a S.Chry
sostozno el lenguage de estos Hereges.De ¡mada sirve la
respuesta de M. Simon; a sabenque solo atribuye a un
tan grande hombre el modo de hablar,y no la doítrina
de Nestorio,‘y aun antes de la condenacion de este He
rege; porque facilmente se cree quando el lenguage
es
(a) Coll. 4.; . (b) Lïb 5- (C) Hom. ro. in Joan. (d) Ho
mil. 6. inPhilip. \e) Hom. a. in Joan.
‘e, "»"u
(ÏAPITULO v.
Que el Critico haciendo decir a San Juan Chrysostomo en
la Homilía tercera a los Hebreos, que hay dos Personas
en Jesu-C/zristo , le hace tener un ¡nodo de hablar en que
jamás pensó este Padre , antes bien todo lo contrario.
Pasage de San Chrysostomo, homilía sexta
a los P/zilipenses.
"É var’
200 «Defensa de la Tradicion,
' c A P 1 T U L o V 1.
' Que en elprincipio delpasage de San Clzrysostomo , H0
milia tercera a los Hebreos , se entienden claramente
las dos Personas del Padre y del Hijo, y no solamen—
te de Jesu-Christo. Infiel traduccion
de M. Simon.
, ' e ¿__._
202 Defensa de vleíTradicion,
es esta : San Pablo impugna a los Judíos , mostrandoles
que el mismo 75v ‘¿u-rin (esdecir jeswChristo) es dos co
sas, Diosy Hombre ¿‘grups Mi, Géov mi ïvrpoarwv. Esrdos
cosas juntamente, porque es Dios y es Hombre, enel
mismo sentido que el mismo Padre dixo en otro lugar,
que era tres: Nosotros somos solamente compuestos de Al
ma ¡y Cuerpo-qa) pero Jesu-Christo es juntamente Dios,
Alma y Cuerpo yyeis aqui que es tres cosas , pero de
estas: tres ,hay..dos , Alma yrGuerpo , que se reducen a
una , que es ser Hombre : y asi» diciendo ‘a los Judíos
que era dos cosas , Dios y Hombre, les havia explicado
todo el Mysterio deila Encarnaeion. - - - x;
5' No _hay aqui la mas leve dificultad. Noise habla
en este lugar de personas,’ se dice solamente que Je;
Su-Christo es dos cosas ; lo que CStCÍEItO , porque es
Dios y Hombre. Esta leccion se halla en la edicion
de París de 1633. , que es de Morél , y segun M. ¡Sin
mon (b) engla de 1636. Estas ediciones están apo
yadas de sus manuscritos", ‘y si M. Simon huviera en;
contrado en los manuscritos alguna cosa decisiva con
traria leccion que ha seguido ¡no10 havria olvida
do. Confesemos pues , quán sin razon ha imputado a
’ San Chrisostomt», tenerel’ ‘language ‘de Hereges , y
de hablar como. Nestoriano tanto como el mismo
Nestorio lo pudiera haver hechou (c) Porque alcofi-r.
trario, de dos lecciones-igualmente ‘recibidas, hay
una que no tiene dificultad¿gyglrrotradexque se abusa,
bien entendida tiene tan poca, que M. Simon nada
pudo deducir, sino por una, manifiestafalsificaciofi.’ ‘
'. 7 A ' ' ‘a ' a «al Sus. ‘hi’. i. ‘ul.
--".'-. ‘fl gï- IU.» murrziïq ¡“I .crr¡o1a0ai1r!D rzs? SCA‘?
iígajmlilom.
' “zh”7. ag. 19o.
¿SIAÏTND ' i
y de los Santos Padres; 203
') f . '
_ CAPITULO‘V1H;..
____—_____\______________
(a) Cone. Eph. part. I. cap. 19. i
e04: Defensa dela Traaficíon,
de la Encarnacion era conocida de todo el UHÏVCÏSO.‘
En efecto, San Cyrilo], que‘ erael defensor de la ver
dad , havia citado a este Santo Obispo entre los Pa
dres que havian condenado con anticipacionïá doc’
trina de su Sucesor ., y que lexos de concordar su len
guagecon‘ el de Nestorío, demuestra que habló ‘el
mas opuesto que le fue posible. No necesito referir
este pasage, puede verse en .la fuente , y no quiero
perder tiempo en un hecho constante.
u‘. Jrlestorio mismo no se alababa de tenerpór sude
feásorrá San Gñrisostomoï; lo que le. huviera sido de
mucho interés para persuadira-toda 1.a Iglesia ,1 quan
do serle acusaba de introducir enr la Catedra de este
grande ¡hombre una. ¿nueva mioétrina. Sus rsSeftarios
nombran muchas vecesájDindorovde TRISCL; ¿a Teo
doro de Mopsueste comode su ‘sentencia spero ni un’;
«sola vez han nombrado a San Juan Chrisostomo’. s «.7,
—, No se ignora la persecucionque este grande hom
bre -padeció. Sus enemigos no dexaron piedra por mo
wervpara hacerle ‘odioso. ‘a: Sir-Pueblo, ya. toda la
dglesia’ que le veneraba. Pero jamás se le reprehendió
¿obre la Fé dela Encarnacion, ni quando se depuso,
mi quando se quiso prescribir su memoria , borrando
¡su nombre delas tablas sagradas de la Iglesia , aun
que no se le perdonó sudoétrína‘ ., procurando hacer
le pasar por Origenísta. Es notorio hasta que punto
entró en esta querella San Cyrilo de Alexandria, pe
(ro aunque sabía como se debía hablar’ del Mysterio
¡de la-Eneamacion ,‘ lexos de-haver reprehcndido so
bre" este punto-a San Chrisostomo , ‘hemos, wistojál
contrario , que le alega,» como un testigo de la Tradi
tion de la Ïgleiía- ‘ - e '
_‘ '72‘ ' r M; 'í!.¿ÁÍ-;:.-.'J (B5.
x x delos Santos Padres’. 20;. «
,--- e-Pero es menester apremiar ‘a nuestro Critico
por otro camino mas estrecho. La reprehension que
hace aqui a San Juan Chrisostomo es haver dicho,
como se ha visto , dos personas en Jesu-Christo. Pero
para mostrar que jamás este Padre ha hablado así,
basta considerar que los discípulos de Nestorio , que
nada olvidaban para hallar partidarios entre los Pa
dres , de cuya Fé y Religion jamás se havia sospecha
do , buscarian por todas partes aquellos que antes
que fuese fixa la significacion de este termino persona,
havian nombrado dos personas en Jesu-Chrísto, Halla
ron que San ‘Atanasio se havia servido una solafvez de
esta expresion , por los motivos y por la razon que
será menester acaso explicar antes de salir de esta
materia; ry-Factmdo observa , (a) que los Nestoria
Ines se han ‘valido de este pasage para defender su er
erpr s; Quem locum in assertionenz sui erroris assumunt. No
liavrian callado , si huvieran visto lo mismo en San
Chrísostomo. Facundo‘, que buscaba tambien por to
das partes como‘ justificar a Teodoro 'de Mopsueste,
y que alegaba a este fin el pasage de San Atanasio, si
vhuviera hallado en San Chrísostomo alguna cosa tan
formal, no la dexaria pasar. Sin embargo nadahabla,
y nadie ha relevado de cosa semejante a este Padre:
claro es pues que nada havia , y que M. Simon le acu
¿asm razon. a -' . ;,3‘j_: rw"
-' Lopque favorece esta prueba es , ‘que elmismo
¿Facundo (b) nombra de‘ ordinario á San Chrisosto
¿mo entre los Padres favorables a Diodoro, y a Teo
, mfifj". ‘f _ _ _ ' l l né-¡‘Ïluxp-fildo
_¡ A (a) ' Fac. libra. capa 2. pag. 47o. (b) ‘Lib, 3: Capa 3. ¡mg
113. 9. cap. f. pag. 486.‘ ‘ - ' “' ' ' ’ ‘
<' '
206 Deflznsa de la Tracficíon,
doro: no cesa de repetir que Diodoro havia sido su
Maestro , y Teodoro su antiguo amigo , y su con. r
discípulo , quien havia merecido muchas veces sus
alabanzas’. Hace todo lo que puede para poner a Teo
doro a cubierto de un tan grande nombre. No con
tento de apoyarle de este modo, escudriña , por de
cirlo asi , todos los rincones de San Chrisostomo , pa
ra hallar en él algun lugar de que pueda autorizar las j
locuciones sospechosas de Teodoro. Repasa sus Ho
milías sobre San Matheo , sobre San Juan , sobre San
Pablo , y con especialidad sobre la Epístola a los He'
breos , de donde ha sacado el pasage de qu'e se trata;
pero no pondera este pasage , el que segun la inter
pretacion de M. Simon sería sin comparacion el
mas formal y expreso de todos; de que seinfiere
pues , que no se sospechaba entonces pudiese ser del
genio de SanChrisostomo , tener tan- mal lenguage
como se le atribuye. ‘
CAPITULO IX. 2
7QueTeodoro y Nestoria no hablaron el Ienguage que se
intenta haver tenido San Chrisostomo comun
con ellos.
CAPITULO X.
oAmrÍULo xr . "e
» -.- 1 , » x "zi _
sEmplea M. Simon contra. lot-Padres, raun Ioslmaslgran
des , los modos mas burlescos é irrisorios. e ' az’
“I
q
» . ‘ u - l‘
cr ‘y de ‘los Santos Pa-dres. ¿gq 7
discurso es fluido ,’ o para servirme de sus propios ter.
minos _ ,— que dice ir consignientesín molestar. los. oiaÏos de
palabras que les fatigguen, los dos prímeros-caraéte-r
res , que son la pureza, Íy fluidez del discurso, siem
prezconvienen a Orígenes ,la. brevedad no. es igual.
Generalmente es bastante rara entre los Padres Grie
gos ; Orígenes supo usar de ella en ciertos lugares, ryi
bastantes para dar lugar a Erasmo, de decir que .era
breve quando convenía; que era menester algunas
veces, y _en materias tan importantes como =lasrde
Relig-ion g; no ‘es permitido de ordinario ‘escasear! el
estiloocEs muy distinto ser sutil. en losïpensamientos,
que es .el vicio de Orígenes ,'de ser obscuro en su ex
presion. — ’ r ’ ' .
: x huviera dicho M. Simon que Orígenes ipensaé
ba ïmuyvsirtilmente , que era fecundisimo ensuscon
ceptos , muy extensoen sus proyeétos ‘en muchos lu‘
“gares, y por eso desemejante-a si. mismo; si huviera
sabido distinguir la obscuridad- de las materias que no
estaban aún inuy declaradas ,1 de layohscuridad del esï
tilo, huvierahablado con mas justicia de este’ grande
Autor. No se puede dudar que Erasmo conoció Íme-u’
jor que él -su caraéïer ,— y sobre estos dos censores ' ha
cemos justicia , y decimos , que ambos se introducen
‘a Theologos , mas. de lo que conviene a los ‘Críticos’:
y por lo que toca a su, arte , shlïrasmo-tiene ahora.
— razon , decide ciertamente muy mal en otros luga
res. Pero M. Simon , que se imagina ser al-guna co
sa ,' porque se hace superior a Erasmo reprehendien
dole , se manifiesta muyvano , y en quanto a Orige.
nes tan injustocomo ignorante. _ f -
Pero ved aqui otra ignorancia , de la que mucho
Tom. I. Ee me
‘mnm—
31:8 Deflensa“ della Tradicion, /
¿nenes ¿sezdefendérárnuestrorAutor. Esta es ¿haver di
úho-deSan Athanasioï, quesijw tienenadaaíe grande,
y eláiado en sus expresiones Í, en‘: lo menos fuerte , y con
uincentewnsus discursos; La ultima parte que .mira al
discurso es indisputablea Pero por. lo’. que toca a. la
pipresion , ‘no sabevzisilxlementetl/Lrsimon. lo .que se
dico: Nada dog-fonda, eíevadonea-¿la expreisiori. No
es-aquhtmÏürador ¿a quien acontece tropezar algu
ms: veces; siendo: su estilo siempre humilde no se res
gbardh de caerqporque iamás zsewlevanta. Todo io
contrario ïesaverdadrcPorque el carafiter de San Atháï
nasíoes rsensiempre grande , pero con rla proporeion
que.pidela,materia.._Sin°duda. que-MtSimon no havia
acaso leído sino de, paso sus admirables apologías , cu;
yo asunto 11o pertenece-á la Crítica ';’ pero- es necesa
rio. nahaverrkído. cosaalguna de, este. Padre -,_ e: aha;
ver leídolosdos grandes discursos que están a la por,
tadarde sus obras, de los quales el uno destruye ‘el
Paganismo, y zen tlotroÉestablece 1a yerdad de la
Religidn Christianai Allí trataral fondo la unidad de
Dios, la‘ inmortalidad del alma’, la conversión de
losfientiles, la reprobacionide’ los Judíos, los mila
gros *,rlas profecías , la predicacion de Jesu-Christo’
conlabelieza de su moral ;en una palabra, todo lo
que, hayÏmas; grande enla Religion ., pero la expresion
acompaña'sicmpre' la‘ grandeza de las cosas. Es ver
dad , que parece no elevarse , porque sin esforzarse, -
ni remontarse, se le ¿ncuentra igual -en‘ su asunto
por todas partes. Sucedelo mismo en las demás obras
suyas,‘ que; piden grandeza; ‘yz. particularmente sus
cinco oraciones ,6) como las llaman los antiguos, sus
cinco ¡ÜJYQS 901m‘?! los Arrianos, sobre todos el ter
'
- una. q- u_ CC"
¿y ‘cielos SaníossPsadresï. 2-1 g
ceros}. son“: llaves, ‘de J ohraidd, eloqúencia , ‘como de‘
erudicionp: Finalmente ¡sea rqu-e trate ¿de alos dogmas;
warm estas;cis1c0roraciar1es;'sea que serestíehrdaz
semanales-hechos ,. cqmïoíermsus asapolcigías. , la -violen.—:
ela 2do mfiytio , lapersecucionr oculta:de . Constan
ciog, las tragedias detlosïArrianossobre el caliz rom-T
pido“ ‘.131:profanacionïde; losaAltares - , el destierro del;
Papafibetídg sie ¡Hosimg y deiotros imuchos. Santos,
elï su yo. propio py: ilas calïizmniasr‘ de que se: sirvieron‘
para hacer su persona ‘odiosa , zseile halla siempre el:
mismo. Uno de los‘ mas‘ grandes Críticos que jamás
bllfiloasfúd-Eooío’, (a) quien portodas partes admira no
solamente, la: grandeza de, los- .pensamientos_,-:y la,
pureza de la Jocucion que M. Símonrno,nieg'a<,_síno;
tambien en la expresion ,—’ y en el estilo , la elegancia
con la grandeza ,la nobleza , lasdignidad, la hermo
sura , la fuerza , todas las gracias del. discurso , la fe
cundidad , o la abundancia, pemásin exceso-ro yíumyar
¿rá áivreprrTor, la simplicidad con la vehemenéíaáyiapros
fundidad; es decir, todo lo que constituye lo sublime;
ylomaravilloso , a lo que es necesario añadía en,,las
materias espinosas , y; dialeéticas 21a «destreza de‘ este
Padre_ en ¿omitir los a ,ter_n1inos del. aar:te-.,-,—pa ra toman
como verdadero Filosofó Émpimooqpr}; , 13411153535 de
los pensamientos con todos los ornamentos , y con
veniente magnifipencia geíyaaovrpeïrrgïggsto se encon
trará en Focio ; pero estas hermosuras no se prueban
99s? testigosY áyQ.,_as_eguro;,Ïa3M,
gusitarlas. ,los.qire.-no';tiensh <córíocimientospara
S_inmn;,Príncípe de los
Críticos de nuestros dias,que como quiera que ha
n: Í t.‘ «¿flag l i: xr , e:.SÏi:*/;:E€ 2 É: ff?“ "N. e’: Y???"
l,
4a í Y
L: \ ...4 n ¿i? .;..NÍ
‘ ta)‘ Br .co . 14o.
, 22o: Deflrnsczirde la Tradicion,
ya copiado enel lugar donde ha juzgado de San Atha
nasio ,_ és menester , ¡no solamente ser insensible, a rto
das las hermosurasdelestilo, sino tambien haver ente
ramente ignoradola lengua Griega‘, para no‘ conocer
en‘ este grande hombre con la fuerza , y‘ la riqueza ‘de
la expresion , esta noble. simplicidad que hace los De
mostenes. Veis aqui pues. sin disputa , y de comun
consentimiento ‘de iosintelígentes el verdadero carïaoá
ter de San Athanasio , ‘a quien se le’ quería dar a lo‘
rhasla pureza del estilo, y en patrimonio un estilo,’
que nada tiene de grande , y elevado. '
< Confieso que no es muy grande desgracia no dis
cernir los estilos, ni saber mucho Griego , quando no
se precia de ser Maestro en él, nise pretende el pri
mer orden de los que saben las lenguas , y la crítica;
pero quando se quiere ensalzar por una ciencia de or
den-tan baxo, hasta creer adquirir por su medio el
derecho de pronunciar sobre la Fé , y despreciar a los
Santos. Padres , pertenece a los Prelados de la Iglesia
rebatir este orgullo , y dar a entender quan insuficien
te es la critica para penetrar la Theologia, pues se
engaña tan groseramente sobre su propia materia,
que es la pureza de las lenguas, y el conocimiento
delos estilos. - '
-5.” _ f
e CAPITULO xm. ‘ mr
rra’ m: .= «n: -: un‘; 07.:‘. —':;. . . l
M, Simon ¿bate ¿San Juan Cñrysostomo, yde alaba po’.
"4 ‘V’ aversionáSánuajfguásïi/tüi i’ ‘i’!
- . .. . . I. » -!
-).*...:'
_ alfihaïlïcïe las homilias, y del estilo de San
filan Chrysosfomo noriraï-rajalttrsjsimpn ‘¿si w
. ¡.4 .m_«.. s; N: s. se)
__J
¿y Je los SaritosPadreg. 22 r
se Miér: en él visiblemente ïuna afeétacíon de alabar
iïieste; ' Padre? porïdeprimír-a San ‘ Agustín , a uíen
ahorrarse‘ porï'ï'su9do€trínaïs0bre¿{_la Gracia defiIesu-A
Christi»); Esun elogiofdígno de admíracíonïde las h0—'
milíasde San Chrysostomo ¿‘haver puesto la príncí-I
pal parte delefeétoque‘ producían sobre el espirítun
de sus oyentes , en’ que (soñada les hablaba de- la ïGraá
cia ïejíeügzl; ‘como-‘sïffinera-un’ ‘error ‘predicar esta Gfflf
cía , ‘que buelve los cbraiones donde quiere,‘ y’ ‘como
si San Pablo vhuvíera debilitado su‘ predícacíon exh0r—
tando con frequencia a los Fieles a pedirla. ¿Qué graq
cia" pedía este ‘grande Apostol para los Corintios,
quando decía estas palabras: Rogamos á Dios que-no
lzagaís algun mai, (b) sino la que les. impedía efectiva
mente de cometer el pecado , y les líbertaba con un,
efecto ciertisimo de tan grande mal? No tenia necesi-Í
dad San Juan Chrysostomo de- una alabanza, dondd
con el pretexto de hacer tiro a San Agustín , se le ha
ce a San Chrysostomo contrario a San Pablo.
Aun con la misma intencion habla M. Simon en‘
estos terminos : Si se comparan las íiomilías de San- Chry—
sostomo con estos,‘ discursos de San jlgzzstín‘ (sobre San
Juan) se notará una grandísima, dífierencia entre‘ estos dos
sabios Obispos : el primera evita siempre las alegoría: , y
los. pensamientos muy sutiles ; a! contrario San: Jgustirt los
procura con suma diltïgencía por todas partes , y no» se-scz-j
bela/‘guïtarveees qué Quiere decir. (c),Yo' ‘solo quiero ob
servar hqflïelïfalso‘ zelo Tdel Critieoïácia San Juan
Chrysostomo. “Evita siempre, dice él , las alegorïas: si
esto es-en lo que se le prefiere‘ ‘a - ‘San Agustín , ‘nada
. .’ - im
(a) Pag. 155. (b) a. ad Cor. ¡3.v. 7. (cb Pag-‘GSO- ¿‘4 5-’
22:2 Degfinfcz deïla Tradition,
impide que; se; le haga —al;.rí1.is_m0; tíempoïmas sabio-aque
San Pablo; 139554.0 que mira. “ágJdvñáfifiÉ ‘í quando
dice :1_as,.—Levi.t.a riendas,San, (Jhrysostomo: 75€: caída-deja
que é! fiPÍSm9,h3rd,Í°É1'O:3:¿qB‘°-: las reflexioiígade 28m
Cbpysgstpmo _so,bre— ua¿pa,cage.de_ San Pablo ¿gomgmuy
sgrilejzggí se salva po; . el mucho ._ le . pertenepía ¿mstrar
porialgwlaacosaj m. del ¡importancia/sn - Sam -
Agustín, «¡avant-aestabasstágdemaïsiada»;suti19lza—,;.que
1:46;4113171!’se 5era «sz.1g.z4zz4s;ye,ce¡ lo que quiere dncimPegque
no, condenaremos la. temeridad de un Censo: , que‘
habla. sin probar , come si dixcr.a..9..raculos’.- swtomare:
¿nos la ¿onfesionsqïue nos hace deïnqkppder segagir. ‘á
SanAgustin por un testimonio, de su ‘ignorancia. mp
-.v- En quabto-á‘ 1o demás, por fávora-ble que parezé.
“pa á San Chrysostomo, lleva su golpe como los otros;
y no se liberta de las garras de nuestro Crítico. Ha
blando de. sus? hfomílías sobre San Matheu ,,,qu’_e‘ son: su.
abra masexquísíflïhdícc: Si no se aprendeen ¿[las-eliantida
literal del textó deSan Matheo, se ve’ á lo metía; qui/era
1;: docïrina de su tiempo. (a) Ved aqui un bel-lo recurso
para el que quiera que se le explique-Ja letra Lquc es
logqwehentrctanto se busca. en San Juan Ghrysostoe
mo. ¿Quando escasa un poco despues ‘susxdígresíancs
morales sobre la naturaleza de los discu ¡sos ,que hace
al Pueblo}, no le hace por esto mas perfeétamente lig
teral; y quandcz aun añade : Que no hay alguty _Escrit_or'
Eblesíagicó gaegqjzaya {apfigqdo ramo en sus, lggnziliqgïnd
wfliw la ¿citada-Ia "Eíüïífuïd . (b) n03vs1ui.sr..e decías
9+¡Fu5€-'11@ya.ap1ígac_lo, mucho , sínor que los “otros E53
CIÍkQYSS 39125335111995 pq se hjan apligado casi_.¿¿pa;la,, y
.'_r¡¡ que
...-._..._........._—.. - .-.....—..\ . .. u‘. ... -- e. 4.. .., .
l
‘
de los Santos Padrgdsi 223
que’ en ‘todo caso j poniéndose a! ello , lograban muy
poco‘. darlo;a. entender á porque‘ a ‘Sahrjuan Chrysos
' tomo‘, quees eiqué- mass: ‘ha dado a ia letra , no se
leáentiende. ‘Así derramaelï. menosprecio sobre to
dos los Padres la boca venenosa de nuestro Critico,
empezandopnr los Griegos, a! quienes-parece alabar.
1211;, f..‘::r.-";=',,r"«.¿ ‘.5 imp ¿J'ai/j WH? " " ' ' 7'
‘x55’: ‘CAPITUIÓ '
'.|(..ïv (‘ 4
‘d- .
2 3o iDrefensa dela Tradición,
sus ‘libros de la Doctrina Christiana , sino tambien en
sus exemplos sobreja Escritura que ha extraftado de
la doéta traduccion de este Padre , que hace hoy
nuestrafVúlgata‘. -;,».-. — .— «e
La segunda que nos-denota la profunda penetración -.
de San Agustín en la Escritura, es havernos hecho co
nocer endiversos lugares las, verdaderas hermosuras
de ella , no en uno, o. dos "pasages, sino en general en
todo el entretexido de este Divino Libro,y de ha
-vernos , por exemplo , hecho conocer el espirittf de
que está llena en díez,o doce lineas‘ de su carta a
¿Volusiano , mas que se pudiera hacer en muchos vo
lumenes. Este era el fruto del zelo ardiente que ma
nifestaba por el estilo de la Escritura; _lo que ‘hace
tambien por decirlo así, que haya sacado toda la un,
cion de ella para esparcirla en todos sus escritos.
-_-,, En‘ tercer lugar _., por el mismo ardor de penetrar
¡la santa-Escritura , recibió la gracia de haver-apre
miadolos Hereges por este, Divino Libro del modo
mas excelente.,y no solamente el mas -eficáz,,_sino
tambien elmasinvencible ,.y mas, claro; de suerte,
que me atrevo a decir , que, nadase puede añadir, ni
á la solidez. desus pruebas , nia la fuerza con quelas
— proponcLlo que ha sido reconocido por toda la Igle
sia ., aun en los ultimos tiempos; y por esta razon, _,__—I&__.,_
como ggqeza gaunahoy enlas lecciones de‘ su Oficio,
¡os Do¿i:qres_ queman-tratado la Theologia con-un
metodo mas _.ex¿acïi.ío uy preciso ,_-se han aplicado prin-f
cipalmentea SanIAgustin; y San ¿Carlos Borromeo
en su Carta a la Iglesia‘ de Milán publica con alegría,
que estalglesia engendró por la instrucción ,y por
el, Bautismo en la persona de__San Agustín ,á_aquel
que
y de los Saiztioslïczdres. 231
que ‘apígóel Manie/zeismo,‘ ahogo el cisma de Donato,
abatir? Ï 5 ‘Pelagíaizbs -,' é Jzízoï Éríunfar Ja verdad. .".'.Í.-ïï
e’: fiFiáálxnénté-g ‘el’ ultimo» efettó ‘del’ ‘cbnocimientor
de las’ Escrituras en San‘Agustin es la profunda com-a
prehensíon de toda la materiaiTheologica. No quie-z
me féxeïnploide M.-spimo'n' ‘hacer-superior un’ Padre á=
otros poribomparaciones odiosas‘, ni ‘a su ïimitacíon’
prónuncíarï- decretos sobrela ‘preferencia’. "Es una‘ em
presa «tan loca como iriutils» Pero esun hecho ‘innegaá
ble —, queSan Athanasio ,' por exemplo ¿queen nada
cede aïningunodeílos Padres-Ten ingenio y en profun
didad 3 y=que es poríhablar: asi eloriginal de la Igle—
sia en las disputas contra Atrio ,' no se estíende mas
que ‘sobre estamateria. Lo mismo casi sucede respec
to delos demás Padres ,-cuya Theologia se ciñe alas
materias‘ ‘ que la ocasion, ‘y necesidades de la Iglesia les
presentaron; Permitió Dios que San Agustín tuviese
que combatir todo genero de heregías. El Manicheisa
mo- le ocasionó tratara fondo de la Naturaleza Divi
na_,'de— la Creacion , de. la’ Providencia, de la nada
de donde todas las cosas fueron criadas , del .libre al—
iredtio ‘del hombre , donde fue necesario buscar la cau
sa del mahfinalmentet de la autoridad , y perfecta
conformidad de los dos Testamentos; lo que le obli»
gaba a repasar toda- laEscrítura , y: a dar principios
para-‘coneiliartodas IasÏparteS-de 'ella." El ‘Donatismn
le hizotratar expresamehtegíy ‘a’ fondo-la.‘ eficacia de
los Sacramentos‘, y 1a autoridad de la Iglesia. M: Si
mondecidiovoluntariamente por su poder absoluto,
qïíeïngjda‘ díirolsobre la Trinidad-c, que no haya sido tra»
wifi) i723?‘ ‘cifforzdopor los ïPadres-‘Gríegïos... (a) Nada sería
."’-"'¡—'Ï‘-Jï j ¡EU ¡“tan 4' U 1.3:. i". ' r - .3 mas.‘
(a) Pag./ a 7 1.
n. "U
ï
ciable, ó lo que es mayor locura , tratarles de Nevado‘
A que
res. A
M.esto reduzco
Simon debe yo la dificultad,
satisfacer y esto es sobrei lo
al Públicos
e , CA- I
\
(a) Pag. 624. y sig. (b) Pag. n47. (c) Pag. 6x8.
\
» CAPITULO XVIII.
Prqsigszyte eldesprecio delaáríutozfi a San Agustín: Caraéïer
g de, este PddFÉpOCDICOQDCMQ delos Críticos modernos:
-m Exortacíozz ¿»la leccíon delos Padres. _
a ,. v n. .
Orzoso es despreciar la Critica apasionada y ma
liciosa de M. Simon , a, quien su presuncíon cie
ga por todas partes; y sobre todo mueve a compa
sion en un pasage, donde despues de haver hablado
de estos bellos principios de Theologia de San Agus
tín, a quienes, como se ha visto, nada falta segurï
nuestro Autor , sino ser apoyados sobre la Escritura,
continúa de este modo: No obstante hay en ellos , dí
ce , algunos jagares que explica muybieit ¿‘z-lar letra, pero
es menester leer muelzopara esto. (a) Pero x alx; contrario,
_ Sl
(a) Pag.a.gq._y sig’. A \ l p‘ a ¡LA ‘c; ' Hb v J
‘ ' y de los Santos Padres. 237
si es verdad, como lo es , que estos principios de Theo
logia son el puro espiritírde la letra de San Juan,
San Agustín que jamás les pierde de vista , será or-,
dínariamente muy literal. Prosigue, el Autor: Es tam
bien algunas veces critico, baxando hasta las mas mínimas,
menudencias de Gramatica, de donde toma ocasion para
lzacerjuiciosas reflexiones. Parece que cansado de cen
surar siempre a un tan grande hombre, se dexa final
mente arrancar alguna pequeña alabanza¡ es la menor
la de hacer algunas rrflexionesjuiciosas sobre la Gramatica;
pero se halla entretanto , que la que señala nuestro
Autor, solo es para ser inmediatamente despues refuq
tada como sutilisima , y que procede de la ignorancia
de un lïebraismo. En una palabra, siempre alaba pa
Ia introducir un vituperío , y concluye finalmente su
critica por estas palabras: En quanto a lo demás, lzay
un no sé que’ , que luego agrada en los modos de San Agus
tin , y gue gustan susfi'eguentes digresiones ; sus sutilezas,
y alztítesis no son desagradables , porque las acompaña de
quando en quando de bellas lecciones sobre la Tlzeologia,
sin embargo sus lugares comunes son algunas veces ergfa
dosos. (a)
; De aquí se infiere, que no hay alabanza por pe
queña que sea , que no le haya costado trabajo a nues
tro censor , yque no la haya aplicado por una espe
cie de víolencía- para satisfacer a la costumbre de ala
bar a los Padres. No hay hasta estas bellas lecciones de
Theologia por débiles que sean segun nuestro Autor,
porque están-muy lexos del sentido literal ,que no
sean contrapesadas por esta pequeña palabra que oie
u
nen 7
(a)' ÁIbid. .1
23 8 Degfiznsa de la Tnzcíícíon,
nen de quando en girando , y muy de lexos , y aun para
impedir que las sutileza: , y antítesis de San Agustín
no Jean desagradables.
Direis qué está todo encrespado de puntas , anti
tesis , sutilezas, que para nada valen ;todo lleno de
digresíones y alegorías. Esta es la idea que formarán
de San Agustín los Estudiantes jovenes , que solo lean .
en M. Simon , o acaso algo enel original para hacer
algunos argumentos. Tal es la idea que se dá de un
Padre , quando sin dar a entender su verdadero carac
ter, solo-se procura señalar , o indicar en él los luga
res menos exactos. Pero importa dar a conocer que
San Agustín en el mismo es todo lo contrario. Tiene
digresiones , pero como los demás Padres, quando
es permitido tenerlas, como en los discursos popula
res ; pero jamás en los tratados donde es menesteres
trechar el discurso , ni contra los Hereges. Tiene ale
gorías como todos los Padres , y segun el gusto de su
siglo , y acaso de muchos antes ; pero que en el fondoí
havia venido de los Apostoles , y de sus Discípulos.
Las agudezas,antitesis, los versos , que eran tam
bien del gusto de su tiempo , llegan tarde a sus dis-
cursos. Erasmo ,que sin duda no le adula, cita los
primeros escritos de San Agustín ‘como modelos , y
advierte, que debilitó su estilo por acomodarse a la
costumbre , y seguir el gusto de aquellos a quienes
quería aprovechar. Pero finalmente, ¿qué dignas son
estas menudencias de ser ensalzadas ? Un hombre sa
bio de nuestros días dice : que leyendo con frequen
CÍR t?“ San Agustín ,—no tiene tiempo de aplicarse a
135 Pidal’ras v P01’ quedar sorprendido de la grande
za , COHSGCUCÍOH , y profundidad de sus pensamientos.
En
_—_—'______——___—___——
J
errores
r 7 r -' , y ad producir disputan rfÏ < ri. - l ' 7'
2,1 . .- . jfidia. ' r A .;.¡.J.-..x- ‘.
" " "1. I i 5 ’ .
— uz a ,7. .4 . . J .1 1 ,'
L
voii. i 7*-f a n v -0. '
“e s_‘E;G‘Pï1‘Tï5Í‘X4.1.1-
'._I"’-5°Ï-R"’ÏïE."°ï-”’-‘
1.‘: 32.2: . ;,. in,» '.'í
'. . n . seva-zur
f ) ’ ‘a;
Errores’
-» u — ' . bre
. la ‘materia,
'. - del
"-’..' pecado driginal
22,4 —:« , isos
-—¡:I. a’. ¡‘(i :?"v.¿s:;; n no!)
.
f‘: Ulfltrïltfii! ‘zii-starter; 9m,J.“sb . .i’ .
‘,1 , ufiinü
i , J'.'.'
U ..
¡o! 193;i,r;r.-'-,_L;;¡IB Ki0’¿¿'Q:‘Ur1NTsÓ._ y? : .:_% i?
{r ÍÏJ“
- zmvjiï? or‘. r n .:-.I< s .. .»':v"':'>*1'- -
Ileregíaformafll de flilario Diacozzo sobre las niños ,—m_ue¡_
tos sin bautismo ‘expresamente, aprobada por M. Simon,
contra ,14 . expresqagíecisionr «de-¡‘dos Conciíioï Oecu- L 3
-, ¿.,-¿ rmeniaosmgeLseguado de.—Leon ,-._y el; (1x)?)
r: a -.r-,«Ï .4? I-‘Ï/oreflcid-v .. z g
Rimeramente manifiesta su inclinaïzlon; ítciasPe-s
__ .— lagio, por la que ha dado ‘¿entenderá a favor
_ del Comentario atribuido‘ otras ‘veces ‘rá, San. Ambro
¿si,o¿, pero que ciertamente no lo es, sobre las Epísto
lassde San Pablo. ElAutor deesteComentario mo- .
¡tiva una gran disputar entre los Sabios; algunos’ le ha
{cen Arriano ,_ y M.‘ Simon tiene razon de justifica-tie
de esta heregía. ‘Si es Hilario Díacono—-, como lo su
, pongo con nuestro Auto_r,sín_ perjuicio de otro pa
recer , es muy cierto que fue del cisma .de los, Lucí
.ferianos , que ¿nohmsidp menos’ fantástico que el de
los Donatistas‘, Se pretendeguese. apartó de él , y no
tengo razon pa ra oponerme a ello. ¿M. Simon al icon
trario, pretende ver- señales de asu error.,o como él
dice. , preocupaciones de su Tízeologia (a) al s príncipíode
su Comentario, Son muy vanas, ;, pero dexemos estas
rsútilezas de la crítica, y vengamos-a lossentimientos
de este Autor sobre los errores de-Pelagio. M.. Simon
produce un pasage expreso a favor del pecado-original,
que tambien ha sido-citado por San Agustín (b),baxo
rw .3; ‘ ; . . .. .4 HÏLZ» p, n, .ï- (d;
L
I i | ~
’\
24.6 Defensa de la Traldíciiolz,
. Se conoce bien loque engañó a M. Simon , y es’,
que oyó hablar de la ‘disputa deslos; Escolasticos- so
bre el sufrimiento detfuego , de que: aquí no. se dis-_
puta. Porque como quiera que sea , ¿es nada ser des
terrado eternamente de la Patria Celestial, privado
de Dios para quien fue criado‘, y condenado al in
fierno , así como lo han pronunciado, estos dos Conci
líos? Es verdad ,, que Hilario ímagínómara losnque
no han pecado sino en Adání, un i/yïerno superior ; (a)
‘es decir ,como lo explica M. Simon , un lugar donie
no padecen , estando como suspenso; , y «sin poíer ¿subir al
Cielo_:opinion',que nuestro, Crítico se contenta re
probar por una debil censura, diciendo: que. podrá
parecer singular. Pero los Concilíos de Leon y de Flo
rencia no distinguen estos dos infiernos, igualmente
ponen en elinfierno los que mueren en pecado ac _
tual , ii original, sin ‘señalar allí otra diferencia que
la desigualdad del castigo.
Heregiaformal
— _ del mismo Autor sobre laIV.Gracia , en cuya!
CAPITULO
\ ‘v.
,CA1_>ITU'LO. v1. s
Que este Hilario preferido por M’ Simon ¿z los mas gran
des i fiambres de la‘ Iglesia ,- además devsus errores ma
(v -‘ nifiestos , es tambien un Autor de muy poca
-_ ,r. -.— fuerza en otras notas suyas sobre . ',
' ,. San Pablo. _ _,
_ _ y 1
a Estodo esteqdiscirrso concluimos , que Hilario
D ‘DO eratan excelente Autor para merecer tan-_
tas'alabanzas-de.M. Simon , que a todos hace , como
seba visto,_inferiores a; él , yaun le eleva sobre lo
queburvo ennla Iglesiamas aventajado para interpre
un latlisctituratvfjuzgándo con: equidad de este Au
tmïs sería: menester decir , que. surestilo es tan, débil
CÜmÍQS“.‘ÏÏWNBSO-srylquescasi siempre, esinferíorsaasu
2 ‘í — ' asun
(a “de 10's Santos*PcÏzcz're5. 2 53'
asunto. Por pgico difícil que sea la materia que en‘
cuentra , le obliga a salir del camino trizllado , se con.
.funde de un modo que‘ no seile entiende; testigo lo
que se acaba dever sobre los dos infiernos , que tiene
un gran lugar todo lleno de tinieblas , y de desvaríos
en su Comentario. Hayen sus notas sobre este verso:
En guiezz todos los hombres pecaron : in quo omnes pec
caverunt , (a) una delicadeza particular de decir, que
..este in quo ‘significa a Era :_ que en ella enseña San Pa
-bl0 somos. todos pecadores ; y que si dixo in quofaun
que hablase de una muger , cum de muliere loguazïur , es
porque la mugerïes hombre, tomando esta palabra
por el genero , y en este sentido Eva era Adán: E1:
¡psa enim‘ Adam est , porque Adán «significa hombre;
de’ suerte , que es maravilla que en lugar de un nuevo
Adán no nos haya dado San Pablo en Jesu-Christo
una nueva Eva. Yo no sé porque Ag. Simon no ha
ponderado una nota tan particular de" este Comenta
dor , cuyos talentos confiesa tan extraordinarios. De
bía tambien observar sobre este pasage de, San Pablo:
Peccatum occasione accepta per mandatum fefellit
me : elpecado tomó ocasion gdelprecepto para engañar
me , y darme [a muerte; que el pecado segun este z¡Au
tor es el diablo: Peccatum hoc loco diabolzzzzz iuteZ/igse;
lo que repite con mucha valentía enotro lugar. Así
se explica tambien Pelagío, no queriendo entender
que la concupiscencia que él- creía que eraibuena, fue;
se llamada pecado por elSanto ApostolPudieraglabar
y
otras
concluir
nauchasmotas
que casi tan
no entendía
infelices de_este_
su original; pero es
t
s
. '.'=.
:..í:. ‘ ‘sima has?)
" ¿,34 .L ¿‘ha “LÍJÏ ,2,
gagr-lkom; 5. v. 1a.
———__*.b_———
s; 5.4, Diefinscz de [a Tradition,
bastante para manifestar , que este Autor tan estima
do de M. Simon , aunque por su dofitrina confusa , y
en los siglos menos ilustrados haya engañado al mun
do conrel grandenombre de San Ambrosio; no» tu
vo en la realidad mejor titulo para ganar la estima
cion de nuestro Critico , y merecer la preferencia que
‘le adjudica , haciendole superior quasi a todos los Au
-'tores Eclesiasticos , ‘a lo menos de todos los Latinos,
‘queïhaver sido en una gran: parte de ‘su Comentario,
como sin ‘temor lo pronunció , un precursor de Pe‘
lagio.’ . ‘> -
,, oAPrrrULo . vu.
que nuestro ‘Critico procura: dar a la doctrina de P-elagio
‘un cierto ayre de antiguedarí : que hace decir» á San Agus
- tin , que Dios es causa del pecado: que le pospone
3.1.,7 ¡‘a Pelagio , y que discuqra ‘siempre a
u ""
' ' este Hereriarca.
ï E ha visto tambien , que despues de Hilario , el
f
Comentador que mas estima M. Simon es Pela
gio. Es verdad, que parece exceptuar sus erroresaPe
ro se verá en adelante , que los reduce a tan poca co
sa ’, que apenas un Juez equitativo le numerará en
tre los Heresiarcas. Ciertamente San Agustin , segun
nuestro Autor , no es menos perjudicial que él, ni un
Novadór menos peligroso ; porque favorece (ver
ïgzrénáaïrne dai de repetirlo )—‘las impiedadesde - Lute
¿o ;de' suertin-queipor la criticada MJSimOn tene
rnos , quelos dos rComentadores mas dignos de ‘sus
erogios entre los Latinos , son Hilario muy favorable
a las opinïóhés’ de Pelagióïy el mismo Pelagi'o._ ‘ _
. , ¿ .. ,1,“
l 7,555 y de los Santos Padres. .' 5g :_
.
, _— , añ?‘ Por esta causa procura siempre conformarle alos ¡A-k1}.1‘-.
(a) Pag. 238.\(b) Pag. 54o. a) mzr-¿rü (u, mp.- .35: (i)
s
<2 56 ' .Defensa de la Tradicion; .
- gos , mayormente las deSizn C/zrysostomo;.(a) X018 nie.
go, y-esperando el examen mas particularsobre esta
materia , se yé la- afeéïacion’ de justificar a Pelagío,' -
haciéndole ‘de’ ordinaria conforme a los Santos Dódïtoq
res;,La.misma,ídea.se halla‘ poftodas partes. No‘ se
puedenegarïgque la explicacion condenada ragui- por San
Agustín seade Pelagio-en su Comentario sobre la Epístola
a los Romanos ¿pero es al mismo tiempo-de todos los antí
guos Comentado/es. (b) Ved aquí unafiierte ¡ïasion SÍÍI
_exemplar,de adjudicar a uh. Heresiarca _1a posesíon de
antíguedadi En otro. lugar :- Toda la aiztiguedad, dice,
parecía ¡lab/ar en sufavor (de Pelagio’, y de sus díscí—
pulos , de quienes se trata en este lugar.) (c)¡No _es
ésta todo: se encuentra, continúa , en los dos libros deÏ
San ‘Agustín sobre la Gracia de Jesu-Cizristo , y sobre «el
pecado original, muc/zos extraálos de lasobras de Pela
gío , cuyo language parecía poco distante del delos Paires
Griegos: y añade , gue aunque estas expresiones pudiesen
tener un buen ‘sentido , han sido condenadas por San Agus
tinrlnsínúa ,.que no havia entre ellos. mas qhe enten?
derse ,yy que la controversia era casï ‘toda de pala
bras. Por esto aun añadezSi. Salt Agustín se huvíera‘
contentado de probarpor la Escritura , gue ademís de es
tas gracias exteriores era necesario admitir interiores, IzaÁ
vría destruido la ízeregia de los Pelagiaflos , sin apartarse
' de la nzayor‘parte de sus expresiones, que acaso huvíera si-‘
do mejor conservar ‘, por ser conformes a toda la Theolo- ‘
gía. (d) Ved aquí una bella idea para arruinar una‘ ‘
heïegia. No’ hayzsino» hablar cónformea ella {y con-i
scrvar la mayor pam de susexpresiones. rEste-zes elïcongz
" ' se
(a) Pag. 24-1» (b) Pag. 25a. (c) Pag. aga. (d) Ibid. f)
. r n x- " (x
c“ y deíos SantosTadres». 1' 57
sejo que M. Sírnon Iuavxría dado a S. Agustín si huvie
ra vivido en su tiempo. Viene finalmente a decirnos,
que se ¡uz debido reprobar esta: expresiones de los Pelar;
giános: ¿unique-hubiesen podido seruirsüe 4:6 ellas, (a)'De_
clararemos en otro lugar este nuevoMysterio , que
M. Simon ha-encontrado en ró, en contra de la
heregía Pelagíana. Se conoce f; dá gastante ‘a enten
der , que atribuye en quanto puede á esta heregía un
ayre de antíguedad, y de Buena fe’ , y a San’ Agustín
que defiende la causa de la Iglesia , un modo de inoa
vacion, de disputa sobre los terminos , y de sofistería.
Procura por todos medios dar autoridad a1 C0
mentario de Pelagío sobre las Epístolas de San _Pa
blo ; y para convidarr‘ ‘adeerle dice : Creo que Pelzzgío
:1]; _ízaz_2z'a trabajado czrztecsl d; Izaverse declazlïzdogovadgr. (b)
¡rers que estas nove a es no están a i. 0 o stan
te se sabe , que todo está lleno de ellas , y M. Simon
encuentra este medio de ínsinuarlas mas dulcemente.
Es pues una ceguedad nxanífiesta de este Critico haver
alabado tanto a Hilario , aun suponíendole él mismo
tan favorable a Pelagío : pero aun es mayor testificar
tanta estimacion
del error alabar apor Pelagío
unofly a otro, ycomo
es llenar la ’< medida
defensores de la
Tradicion en perjuicio de San Agustín. L
. q: yn
¿.' J . .. :. . .. - -, .:;
Kkz CA
aépo Dwnsa de la. Tradicion,
\A.I‘_« (¡I 2'
‘- “CA-H
262 Dqflnsade Id ,T1Ï’adicí0n,
Y _.'- using-fi) mi‘ :5 .';1‘1r..',»r.rz:: mi: '15" i‘) na «By-nl
nu¿__ï‘..‘az: nevigiïsfcj ‘íPkÏvíLrO Xní .Í c’. 13:12:10
Diez; evidente:
.4
u
ns«_ demostraciones
"im: arg-x?" 'l‘.,'i'.’ ' :, que' "’
San"‘Agustín
.'
' í , le b;
ÍÍ dé
,
’
¡:1 í ' . . .
,: A ::;.(‘. 2' oiiizoaa (s) wn 2 2.7) . -v_.r.í .Í _ï
Septima ¡oezïavayy namldemortracion. Sandgustin fiel-n
. cribede orden de los Papas, contra los Pelagianos, les’ .i
T » ‘envía sus libros , les somete á lacorreccion de
--,g _ _.‘_. lejana: Si11a,,—y_esta los aprueba. . ,
. V‘ 7 ‘ ¿‘J
:—‘ T
l
¿‘Ola/citados Saritos Padres. i226‘;
qlïerla corrigiese , ‘porque estaba determina do a mu’
dar todo lo que hallase'en ella’ que reprehender} de y
donde resultan tres verdades ‘i la primera , la habili- v
‘dad de SarQAgustin , á5quien se remitianïlas cosas
mas grandes z la segu-ndabfsu humildad ,pues esïzaba
tan sumiso al examen de la Santa Silla: la tercera , la
aprobacion de sus dictámenes, porque los Papas ‘a
quienes les sujetaba ,— siempre le dieron respuestas fa
vorables py conservaron a este Padre toda su estima
ciones es. nal: , ¡gano me- s. sin: “rasa:
« a al e:
J t ' A c A P IT UL o
V -. e ¡ XII. b '
~" . I‘ .
u y266 ¿Defensa de la Tradicion,
1' nos para eludir la persecución que se empezaba , Pau
‘ ' ¿lo Orosio (a) produxo contra ellos _la carta de San
Agustín ‘a Hilario, y los libros de 1a,: Naturaleza, yde
ilaiGracia, que scaqab-ïtbartde publicara ..C.omo lluvias;
¿respondido Pelagio.,_que no havia que hacer aprecio
de San.Agusti_n,,' todo elmundo gritó contra esta biosfe
mía que havia proferida contra un Obispo , por cuya boca
. ítaviatDioscsanado ‘toda elAfiicadel cisrna de los Dona.
zgjstas ,vdigie_ndogque era amenestegt arrojar a Pelagio, no
solamente de esta Congregacion , sino tambien de toda la
Iglesia. Sobre lo qual haviendo dicho Juan de Jerusa
lén: Yo soy Agustina , para insinuar que a él le pertene
cia vengar -la inj‘uria,y defender la causa de un Obispo,
le respondió Orosio: Si quereis representar la persona de
Agustina, seguid tambien sus sentencias. Desde enton
ces pues, a saber, desde el principio de la disputa , y
en una Congregación , que sirvió de preliminar al
Concilio de Diospolis , se empezaba ‘a reprimir a Pe
lagio por la autoridad de San Agustín : Ved aquí , se
decía , lo que el Concilio de África detestó en la persona
de Celestio :' ved aquí lo que el Obispo Agustín abominó
en los escritos que se izan producido , Üc. (b) Al mismo
tiempo se declaraba , que se adlzeria á la fé de los Pa
dres que, toda la Iglesia veneraba ; y por aqui se decla
raba que San Agustín era el defensor de ella. (c) Asi
se hablaba de este grande hombre en el Oriente‘ al '
principio de Jasdísputa- Beto... al: 533127‘. nüinseuaïros,
despuesdïó elfirignte. un aegsisïrszpíoflxassautsntico.
dsïlasïoétrina
.'-.<_— i’ s
de-‘este Padre ssquaadp;
2.4 ‘fr c: .
sels-dimpesader;
ÍJÍ) 1:a;..Ï_
arrasar:
P1533?‘ RI
.i!>¡4;?.I"g‘é>~
i
Qatar: ¿ias-If
A Á m; “ll
c-‘hïydeflos Santos Padres. 2 67
Theodosio , sin ¡mas retiínïéódabïoh que la de su doc
trina , le convidó al Concilio general de Epheso , por
una carta particular ; honor que ningun Obispo ni en
‘el Oriente, ni Occidente recibió jamás. Sabese que
los Emperadores , quando escribian semejantes car
‘tas , lo executaban con°consejo , y muy de ordina
rioïvalielldose de la pluma de los mas grandes Obis
pos que havia enla comarca. En la carta (a) que te
nemos reconocía Theodosio a San Agustín por la luz
del mundo , por el vencedor de las heregías , y como j
aquel cuyos escritos particularmente havian triunfaJ
fado de la de Pelagío. Pero cómó muchos la reprue
ban como supuesta , sin deten ernos en esta critica , el
hecho alegado en esta carta es fuera de esto muy cons- á
fánte ,'y nadie ignora , ni niega lo que escribió San
Próspero‘, que durante veinte año: de guerra con lo: Pe- J
lagiano: la Armada Cat/zolica , solo havia combatido , y _
triunfadolugar
dexado por las manos de San
de respirar.” ’—- Águitín , gue no le: ízavía 9 ; ' A l
‘(ïktïámïádisez-932,330.3»:l w -¿.-,--sr
27o Defensa dela -Traclicion,
ridad ,no solamente en los siglos siguientes ,en que
el tiempo apagó la envidia} sino en el lsuyo , que se
creyó solo capáz de abatir los adversarios de la Gra
cia. No es bastante , se le decía , proponer las razones,
si no‘ sejunta a ellas una autoridad que los espíritus conten
ciosos no puedan menospreciar. (a) Nadie tenia en la Igle
sia tan alto grado de esta especie de autoridad, que
la vida y la doítrina concilia a los Obispos. Se le su
plicaba pues usase de ella. Los hombres prudentes le
decían por boca de Hilario: Todo lo que quisieres,o pu
dieres decirnos por esta Gracia que admiramos en nos , pe
queños y grandes lo recibiremos con alegría , como decidi
do por una utoridad que nos es igualmente amada y vene
rada :‘ tamquam a nobis charissima , 8C reverendissima
aurïtoritate decretum. (b) San ‘ Próspero le" decía-al
mismo tiempo : Pues que por’particular disposicion" de’ la
Gracia de Dios en nuestros días no respiramos en esta ateí
sion‘ sino por el vigor de vuestra doctrina, y de vuestra cari
dad , instruid a los humildes, y reprehended ‘severamente’ á
los sobervios. (c) Esto-se le ‘escribía-de; nuestras Galíïs’:
quando al riesgo de los mares Tse escribe ‘deeste modo
á un—Obispo , sin duda se le ‘mira como al Apostol de
su tiempo ; por esto el mismo San Próspero le decía;
Todos los que seguimos la autoridad santa ,' y apostolica de
vuestra doctrina, hemos’ quedado muy instruido: porvues-ï
tros ultimas libros. (d) Lo que preparaba el camino al
joven Arnobio , Autor contemporaneo , mediano enf
sus pensamientos , pero natural y sencillo , para decir
a Serapion en su Dialogo: Nome quedara’ duda , si meï
—- f ‘ l ‘ u. ' .;)¿ V‘ ¡de
(a) Epist. Hilar. adAug. inter Epist. Aug. 9.9.7. n. ‘9. (b) lbid.‘
n. ro. (c) Inter Epist. Aug. epÏSt._9.2;.n. 9. (d) I bid. nen. _
q» y de los Santos Padres. 27 1
alegais el testimonio de San Agustín , porque tendré por
lzerege al que le repre/zenda;(a) a lo que responde: Izab/ais
segun mi corazon ; porque creo, recibo, y defiendo sus pala
bras copio los escritos de los Apostoles. Lo que no se
puede decir con aIguFna‘ confianza de ningun Autor
particular , sino quando se sabe por la aprobación de
la Iglesia que se ha alimentado del jugo de las Escri
turas , y no se apartó de la Tradicion.
. _‘ ' CAPITULO XlV.;’-í
a--*__"'——‘_—__——_—
(a) rrEpístréxlestrPíPïpm‘Prosp. &‘flflai';in"appïto‘mtïb‘."fiur
gust. Pag. 232. cap. 9.. ._ .1 __ l” _ '
V. un)... ¿tu , l;
.. '}v¡
yde los Santos Padres. 273
In0cenci0,y del Papa S. Bonifacio, que le Éonsultaban
sobre la materia de la Gracia. ElPapa San Celestino
(a) confirma el testimonio de ellos por el suyo , y po
demos añadir ¿{este elide San" Sixto , Presbytero en
tonces de la Iglesia Romana , y despues sucesor de
San Celestino’ en la C-athedra deSan Pedro. ‘i t4'\.x;'-=Q
Y porque se oponía contra San Agustimgue su
doóbrina era contraria á casi todos los antiguos , (b) s_e_
determinó en tercer lugar , que lexos de que S. Agus
tin fuese Novador , al contrario sus adversarios eran
quienes acometian la Iglesia universal por sus novedades,
‘que ‘se necesitaba resistir ; que los Obispos de las Galias,
a: quienes San Celestino dirigía su Carta , debían darle‘
á entender que'e‘stas empresas( contra la doétrina de
San Agustín ) les desagradaban ; (c) y todo esto estaba
apoyado-sobre esta sentencia , que desde luego havia
establecido por fundamenti}; desinat incessere novitas
vetustatem, que la novedad cese de impugnar la antigne
dad : (d) era decir , que los enemigos de San Agustín
dexasen de resistir ‘a este Padre , quien de consiguien
te se propuso como defensor de la Tradicion , de la
que M. Simon le hace adversario. Vicente de Lerins
cita este pasage del Decreto de San Celestino , y ase
gura que reprehendíaen él‘! c‘: lo_s Obispos de las Galias,
de que abandonando por su silencio la doélrina antigua,
permitían levantarnovedades profanas. (e) Era pues‘ San
Agustimmayormenteen sus ultimos libros de los que»
entonces se trataba, el defensor de la antigua doítri
ZVÜÍÍÏ- I. 1 1-‘ r. Mm na,
A - ¡"HHLHJF
\ ‘ x
c’ y de losz-Santtos Padge}. 37 g
‘dónde 1a perseverancia, que sus contrarios acusaban,
que no estuviese elarisimamente ‘establecido’ gn las
‘obras anteriores que profesaban aprobar. La-Carta i!
Sixto puede darïólaffierite testimonio de ello, asi co
‘mo el libro áBonifacio_que— el ÍPadre Garnier llama
con razon unrfdeïlofifildstélïeeleizfi! de San Agustín ,- (a)
y que esalmisrno tiempouno deaquellos dondeesta
bIece mas claramentela Predestinacion ‘graciosa-T y la
‘eficacia »de_la Gracia. No se puede decir que la Car
ta'(b) a Sixto haya sido ignorada en ‘Roma , adonde
sedírigia. San Agustín hacia ver en ella ‘a este'do¿to
‘Presbytero 4,’ qtiedespuefiiino a‘ ser-un tan gran Pa
pa, que la tioítrina =de que se trataba era la‘ propia‘
doctrina de la Iglesia Romana , que San Pablo havia
enviado conla Epístola a los Romanos. Los libros a
Bonifacio sezretñítiétán a este-‘sabíoPapa para suje:
tarles expresamente á suïcorreccion. Era pues lggchó
esto con conocimiento de causalfïycon una"plena ins-*
truccion que los Papaspredecesores de San Celestino
havian estimado a San Agustín, y sus obras, y era‘
muy tarde para vituperar los ultimos libros deïeste’
Padre,despues que los primeros havian pasado con
aprobación.
Se podría añadir aqui la Carta a Vital, de la que
el Padre Garnier escribió , que a ninguna de las de Sau
Agustín era inferior , y que descubriendo en ella el Mys
terio sagrado de la Gracia preueniente , daba doce reglas,
donde la doctrina Catlzolica sobre esta materia estaba com
prelzendida. (c) No obstante es una de aquellas donde
' Mm 2 y es
__.,_¡'—___—______________——-l
, .
f “I.
5 -u ‘ n, n u u ‘ n )
- r v_ l‘) t‘, r x í
-1
(- k Ñ J
\ .. I
. v
¿el
. Í
¿ yde lolfSafntos Padres’. 277
’ C
n
(a) In ead. app. p. x52. (b) Cap. r7. rbrd.p. x57. ina‘! ¿"Rift
‘ 7" ’ ' a o
28o Definsaele la Traclzczon,
Arlés , y de los lugares donde los escritos’ de Fausto
havian dispertado
havian-estado las despues
ocultos reliquiasIde’
de losPelagïianOs,‘
treinta ‘años ,tra'tó'
._..
"'
‘ . J ‘w
x 4.a.»
284i. .Defensa de la Trczclicion,
Gotescalco era el libro intitulado Hypogzzosticon , o
Hypomnesticon , al que no daban esta autoridad, por- 1
que suponían ser de este Santo Doctor. Asi en una ‘
ocasion en que se trataba , o de escusar , o de comba
tir los excesos , y durezas de Gotescalco , San Agus-.
tin , de quien abusaba , fixó la regla de los dos parti
dos ; y su dofitrina sobre la Gracia , y la Predestinru
cion subsistió siempre en su cabal , que es el testimo
nio mas seguro que se puede producir de la autoridad
que havia adquirido en todo el Occidente , y lo que
hace mas a nuestro asunto es , que era tan reverencia
da ,porq-ue se suponía como indubitable , que este
Padre havia hablado en esta materia (a) conforme :2 los
Padres sus predeccsores: juxta scripturat veritatem , 8C
praecedentium Patrum reverendam auítoritatem.
CAPITULO XX.
(a) Serm- '1- de B- Virg. (b) Vita Cass. ap. Suid. ad 27. Aug.
cap. 9.a. (c) Fragm Epist. ad Hincm. (d) Remíg. de fin. Scrip.
quót. 2. .
_., y ¿le los Santos Padres. ‘189’
ma el libro del ¿ón de la Perseverancia, un libro exaítisï
mo. (a) EsteÏes donde los Críticos módeinos hallan lo;
mas grandes excesos. Hemos visto otros _Autores en
¿aladisputa del siglo nueve. En el mismo siglo’ Remi
gio de Auxerre(b)'colocaa San Agustín en orden a
de la Escritura, superior a todos los
la inteligencia _
Hemos hablado de San Bernardo.
otros Doétores.
En el mismo siglo Pedro el Venerable , Abad de Clu
'ni, (c) llama a San Agustín A e l Maestro de lallglesia
despues de Sa
n Pablo. Nombraremos por la Alema
nia á Haimon de Alberstadt del siglo nueve , que po
ne sin duda a San Agustín superior á todos los Doélores
para ilustrar las questiones sobre la Escritura. El Abad
‘RUPÜIÉO llama a este Padre la columna de la verdad , y
sigue sus explicaciones sobre la materia de la Gracia.
Toda la Inglaterra se nombra en la persona del Vene
rable Beda‘, quees su Historiador , y su segundo Doc,
torxdespuesde SanGregoriouiSan ‘Anselmo Arzobis
po de Cantorbery declara , que sigue en todoá los
Santos Padres ,‘principalmente ¿z San Agustín.
«m; En Italia tenemos enel siglo sexto al doéto Ca
siodoro, quien en‘1a materia de la Gracia considera a
San Agustinïéomoel Doótorde la Iglesia ; no quiero
nombrar aqui losPapas San jCelestino , San Bonifa
cio, San Sixto , San Leon , San Gelasio San Hor
misdas , SanGregorio , y otros muchos que se podría
citar , porque su‘ autoridad pertenece mas a toda la
¡z-(¡Yr y fliJ
Iglesia, que ¡ala Italia, tgozl rzaxnp. .A
‘ .m:!’;3_¡;‘_?,ll 1;‘: rr ‘Í’; :1 ¿un :2 “ ‘z .t
if‘ 'r"" "¿Lío e ‘ " u
¿‘Tomk A. .
' t
-. CAPITULO I.
rA p ,
Doéïrina constante de toda Ia-T/zeologia sobre la preferen
cia de los Padres que escribieron despues de las disputas ‘_
de los Hereges. Hermoso pasage de Santo Tlzoma’:
que sacó de San Agustín toda su doctrina.
t“ p -"— Pasages de este Padre. _ ‘
_ lascosas .desdeícl origen —, y descu
,__ tomar
ARA
bijir por principios las ilusiones de Simon,
se dehetenerzpresente una excelente doílzrina deto
dos los Thpologos, que Santo Thomásexplicó con" su
precis ‘on ypureza ordinaria en uno de sus Opusculos
contra los errores de los Griegos,dedgcado al Papa
Urbano Quarto Ïy eompuesto por’ su orden. (a) Des- ' ,4
de el Prologo de estárdgaéta obre, , Hide asi ': Los erro- ‘
res contra la sana doctrina dieqogí ocasion r3 105 Santo! Doc
tores de explicar con mas tircunspeccion lo que pertenece
¡z la Fé , para destruir los errores que se leva/Italian en la
' Igle
(a) ‘g. Opusc. contr. Graec.Prolog.
r
o
y de los Santos Padres. _' 29 5 _
Iglesia ¡como aparece en los escrito: de lo: Doéïore: que
¡precedieran a‘ zlrrío , donde no .32 ‘encuentra la unidad de
l ¡la EsencíciDívina tan ‘exaálamente dedamdtz como en los
; ' ¿que le: sucedieron. Asia; acerca de otro; errores; y extá
‘ .710 aparece solamente ¿tz ‘dirtinta: "Doélores , sino aun .871
San Agustín , que se ¿ventaja entre todos los demcíxjPors
gue en los, líáro: que trabajé despues ‘dada Izeregía- de Pe;
Iagío , hablo’ delpoder del libre alvedrio ‘con mas precoub
¿ion que Antes de nacer. esta Izeregía fluaïzdazdgfendió el . -
, IiIJre alvedrio contra [05 Manícheos, dixo cosas de que los l
l Pelagíarzo: , esta es , los enemigo: de la Gracia se han’ m
lído. Tal ha sido la doctrina 'de Santo Thomásr ensuna.‘
,de sus obras la mas autentica. Advjertense en ella dos
verdades: la. una dehecho, en la preferencia que dá‘ á l
San Agustín: la otra dederecho , quando establece el
aumento de‘ las luces de la Iglesia‘ en sus disputas .,_ en 4
quem: hizo mas que. explicar‘ elsentímiento unanímc
detodoslos Doctores." , j‘ * z ' a . '_ r sv’
r '2¿tinycuyas
¿Lo havia tomadoxiomo acostumbraestán
palabrassobreeste"asunt0 de San Agu’los‘
todos
~
. — - .l
tsatyeezos‘ïsaans ¿Padirgesi e97
_ g; qbryíj 9.; 3 p r.-.-:Í .":I ¿híáedmoa msc; c-Ïrevní-¿f
«sin 4.4i :3 orCi-“A ‘P‘I"BÜ-Ü"O*ÏÜIÍQ'FZ .?SÍ(,_‘¡¡=":' 2.0i.
',' w;'¡i3.;i; z .. . i. t, ' si i; , 02251170: ong;
Lo qué-lla Iglesia? ensenada nuevos-sobre Iádoélliinsuflosa‘
ge: de :I4"mm despenínsïqïfizno arzificiiwue M’:Silrlon_ 951543
t‘ sé ¡asignen su láternplmapolan» a los-‘antiguas enperjficio up
f5 w -— «‘ il ‘de llos-gue‘expresamentïerirataron ‘las ‘ma- r r: s 3-. ‘r
+3 :1 2-5» ‘í iérias contra los Hereges.‘ , ' L. r: ."'
rn’ Ltdnanch-z ¿Juiüp :..- :2... _c... . T '¿ . Ji i..: ' r
- — stfaldbeéiinx ‘ae-Sanctiflgóstin’, ¡bae todos‘? so‘:
t e rnïsiernosboaóreïresama ¿regla en‘ ¡á .-The'o.logías
y como he dicho una solucion de’ todas las‘ dificulta
ydessusobre la Tradicion. La gara _de la Iglesia es una,
doétrína-slémpïeïaíïlnlsma; no es siempre
igualmente clara , igualmente expresa. Recibe con el
tiempo‘, ‘dice bellishbameírteïVicen-te de Lerins ,= no
masvefdad‘, sinoÏinas‘ evidencia , mas lnces ',' ¡nas presi-v
sión ;>x‘ (a) yízsto‘ ‘principalmente- con ocasion delas
nueírasrníheicigíaér Entonces‘ segunwlósterminosdel ¡nís
mo Autor-ise emñalvncïsïciïmnïenmJarque:antes se creía
con obscuridad : las expréïslbnesflsdrí mas claras , las ex
plicaciones mas distintas: se lirnan, se desenredan , se
pulsa los- dogma}: saJlzs añade lapenfizcrion , la zformg ,j la
distinción sinloeïznrársuéáplekiïzsd ,y úrsztz, Íintegaidndc. Así
quanelordespuusïfle lásriesutucíonésxle. itosaïadzesque
combativo-cm‘lasdieéegiasJseñapártáïdeeliosrblosm
bresspiopbniendoles- los: antiguos ; quaridol: ‘a sexeni
pla de'»MsSim0n;,r4se alaba: sobseila vmabeiiardqla Grag
Ola los Dbítored qnerpficcedíeronïaïfiéíágiógipfira des‘
ácírefistarvñ San‘ ¿Agnstiwpqueifué rfiau ïeviidenteufénte
EÏLTDPHJLZ‘. tattoo: ‘por; zi ‘iiFpw .. "w213i han: ,
1 .2» s ,. ti: ‘¡L «en “mi \'r u»
c5¿i¿¿.'.“.f‘gag; 36k;
¿Q3 Befenïslt ‘daríaïreizdicápn,
llamado para combatírle , es un lazo que se tiende a
los simples, parfiïhaéïérlésïjrfieféríï sloïque es mas obs
curo y confuso , a lo que es mas claro y distinto , y
Iza-quezse-ídtïïrdde pinamar-ln: quefise zxhatímeïditado ylíe
mado consumercuidadqniramüsmoaésques «sílserdixera,
queïrdespueside las ‘GXPÏÏCÜQMGSQÏ-(‘e ¿San Atlra-nasió
vale masaunlaolver a-dasexpresíones massïconftlsas de
San Justino , odeflrígeneadessan Díónysio de Ale
xandria , y de otros Padres , de ‘ quienes abusaban los
Animes: mu: San. Atmnasfle era uaflexador». 96;!
axïqeeducía la mas-seguidas’.
IIISSÍÚSÍGSQf Ïbafllzogia álexpresícxnes
¡»L a anrr ’tiras distíphïï,
«.2, ¿al (un: í
. _ . ,5 _‘ t I‘. .
¿‘ïiííi E '.lv:Ï..'...’. Li 3A- ‘VW-J 3x1 Jlíllïi’ ‘ E; 5.:. D‘)
errqrmïsïz 29 oí: QSAIumrvríaflirriul-Lnhábrrí’; n: v
if: rw’) edíaafl Jïiïtïfïïü ‘nnemisrspqí e ¡ratio nínurnïrgrsr":
Quepelzmodo do alegazfMefiimnrlá ¿antíguedad fffljflzld?
¡‘o para los simpfes ,- y rstmïapozrer los Griegos g agas; Itatí;
aos. «Bruekasxíe Simca, auge (trar-sado: sale; los; B4: r’
-;a - 1ÍIWMWLZ= ‘la? Lbtiffigídá Mb 10x13 ¿ÏQrrm
21:3 33, azmrídíe‘ dïrfltïítïlfiezxflílwá 3451320 A on;
4.5 Eíáí , 22.112."; n’. rr rPdIÍEQín-Bfáfilgs 5 así : mir-Fr. "Im run
Si. , ‘iïníiffl .. l‘ E" ""." * f " lriíj-ÍÏ; ¿un 'e':—.‘;.':í)n:"-"}
_—
‘por eirardor que tuvo en la ‘disputa, que no dexóz; sino el
nomlífé-defiibertad ,’ fzatiendolaprevenir por Decretos Di
ïwinos, que parecían quitarla toda la fuerza. Notese de
pasogla-‘calumnía que hace ajSan Agustín de quitar la
ifuerza ‘de la libertad ,y dexar de ella solo-el nombre. .—_-=._ _ :.
fiéihaïvistolquelM. " Simonïímputa ïel mismo error ti; a
este doíto Padre; hablaremos tambíende él eneotro lu? l
gan Lo que es menester’ advertir aquí es , que segun
(Ïïffcio SAgustin es el Novador; apartandose del sen;
timlento de los Padres Íantíguos dexa el suyo propio,
N. rvnwvwoq. _
m, _ m...
l.
.\,_‘
~
y de los Santos‘ Padres. 309
y’ noentra en estos7 nuevos pensamientos {sino des.‘
pues de empeñados en el combate con los Pelagianosi
'Así los sentimientos naturales , que tambien eran
los mas antiguos , son los que San Agustín siguió al
principio.‘ EstodiceGrocio , yesta es la ‘idea que dá
de este PadreJ-Si le preguntaísgqué vino ii ser- de la
antigua doétrina ‘que pietende abandonadzr porfian
Agustín , y dónde se conservó el sagrado deposito de
. ella ', la busca entre los Griegos, y en los Semípela
gianos. Esto mismo ',"como se" acaba de "ver , sigue
puntoípor punto M. Simon ; ¿pero qué vinieron a ser
. ‘estos sentimientos antiguos que los Padres havian sea
guído antes que San Agustín introduxese sus noveda
des? Grocio que acaba de enseñará M; Simon , ‘qué
es lo que debe seguirse en San‘ Agustín , qué es llo aque
‘esconforme a’ la Tradicíon‘ antigua ,7 es elprimer sen;
tímiento que este Padre retrato , le enseñará también
donde-‘perseveró el deposito de la Tradición : perma
¿necio ‘en los Griegos , y en los Semípelagianos.‘ Allí
es donde-M. Simon ‘le busca; pero‘ es- Grocio quien
le enseñó el= camino.‘ En íquanto a los Griegos, ¿vcd
aquílas palabras qué se. siguen " inmediatamente. a las
que se han leído :la opinionantigua , y mas. natural se
conservó , dice , en la Grecia , yen el Asia. (a) Por lo
que hace a los Semípelagianos , el grande nombre , pro
sigue , de San Agustín le atraxo muchos Seólarios en el
Occidente , donde halló no obstante adversarios de parte de
las Galias. Sabese quien son estos contradíótores : fue
ron los Presbyteros de Marsella , y algunos otros ácía
la Provenza ; es decir , como se sabe , los que se lla
’ man
(a) rlbid.
3 1o Defiensa dela Tradicion,
man Semipelagianos , o - las reliquias de la heregía de
Pelagio: fueron Casiano, y Faustode-Ries- Tales son
los adversarios de San Agustín en las Galias , mienÏ
tras que todoel resto de- la Iglesia abrazaba su doc
trina: en ‘estos se conservó la sana Jy antigua dofitrina;
se conservó ,< digo , en los-adversarios de, Sanï ¿Aguas
tin , que la Iglesiacondenó. porfintantasssentencias:
Grocio , un Protestante ., un Arminiano , un Socinia:
no lo dixo en muchoscapitulos a M. Simon ¿yi otros
Criticos se atreven a seguirle. Tomó de él este bello
systema de ‘doélrina , _-.que' compara los,Grieg0s
con los Latinos; los primeros Christianos con los
que les sucedieron ; San Agustín consigo mismo,
donde se prefieren los sentimientos que el mismo
San Agustín corrigió’ en el progreso de sus estudios,
a; los quedefendió hastala muerte; y las reliquias
de los Pelagianos ‘a, toda laalglesia Ca-tholica. r Los
Socinianos triunfan pormedio de Grocio tan vlleno
«'de suespiritu , yde, sus maximas,dán la ley a los
¡falsos Criticbszhaetauenrel seno de la Iglesia «gjla Ciuyn
dad santa; se pone, alos pies ¿ el atrio del‘ Templo
sd entrega a loïcstraños , y ¡los Sacerdotesles abren
la ‘puerta. , . . z
. r r‘ ‘ J _ , .
‘f ‘Iuxfi- l l ¿‘l p r I" ' r 1.4:) - i
r' —'. ,_
'-- w ur . ._
1 r
"¡w i . - S- . J , 4.. v9 _ ’ i.) '01- i
f‘... l
‘CA
~
a Aïgustimdiódde.flmvfiexdaduélxlïtanfieixla disputa:
Perg “si parahacclzlefantas rinmfitéítahfé sséqíxiáneruún
qúeïháyét‘: prevédídb tódaslas ‘disputas; ‘noïfaltarárss
taÏventaja á esté doétüífladre; Es- unazígnoranciau de
Grecia‘; yde tódos aquellos ¿qqáaóhsarí it Saii Agilsa
tin de haver pronuniaiádd en cllaalzmi-de lsrdisplita res-I
tosnsentímíentosg ahsúrari zdeïnovbdad. Pórque
nadahaytah tobstangéïgconior:lo.que él-tniszno ho»
taghablanddde’ súszlibrosl a» rsimpliéiáno ¿amm de
San Aïmbrósio enel: Obispaclode Milán, qué. aunquó
109,1 escrihíeseialï príncipidde \ sus Obispadot; "quince
antes quehuvíese ‘¡Pelagíanós en eL mímddrï; Mi»
vía enseñgdó pïéñanjante, ¿ni ellos ¿‘y sin- tener/nada
que añadir despues en la Ísnbstqgicia , Ïairnismaldoéá
trína de la Gracia que defendía durante la disputa , y
en sus ultimos escritos.
Esto mismo escribe en el libro de la Predestina
cion , y en el del Dón de la Perseverancia , donde. di
ce lo mismo que enel libro de sus Confesiones , que
publicó, dice, ante: de nacer la Ízeregía Pelagiana; (a)
y no’ obstante, prosigue, se hallará en él un: pleno‘ re
» con
(a) Lib. de Prxd. SS. cap. 5. de Don. Pe-ggey. cap. v2.0.5}. 1 . ,' W
\
. CAPITULO XL,
,»(
» i’ - ‘Pla-rage dei Ebro de la: Confesiones
(a) Epist. a6. alias m6. (b) De Don. Persev. cap. a. nun. 3.
(c) Ep. 26. alias 3g. n. g. (d) Libtatcap." 19720. Retraól. lib.r.—
C» 9. n. 4. (e) Lib; ¡.de LibergArb. cap. r9‘. no. 1 a r . ' , 3
~b
l‘ Eque
conoce
este claramente en , qué
Padreretrató y él. consistía el error '
señalaelflórigefi ' *
(a) De Don. Pers. l. XX. (b) Loco jam cit. (c) De Prades
SS. cap. 4.. (d) Epist. ad Aug. .¿ ,3 ,._* 1.4i... _r - 1
u\s ‘
3)
WI
3 3o Degfensa dela Tradicion,
escusarse a si mismo , loque huviera podido hacer , si.
se huaviera- abandonado áfcste espiritu_que_ explica , y
escusa todo , confesó francamente su error; y lo‘ que
se debe tener presente es, que le confesó como un er
s— —v—A‘
—_¡ ¡_fwv_sg_ ror, y un sentimiento digno de condenacion : damna
bilemsententiam ;-mas yo estaba, dice , en. este error-z y ,
finalniente,,rerré como ellos. (a) _ ¿. .,; —
s
CAPITULO xv. .¿o‘
"J .3 ‘í ,.
San ._Agustin sale conprontitud de. su error por la.poca ad
Izesion guetenia asu propio parecer ,',y, por las — consultas
gue le obligaron á examinar mas exaéZamente la verdad:
- ' respuesta a Simplioiano:progreso natural del enten
-a v dimiento de este Padre , yeercer estado. de
-° * '..‘.'« sus conocimientos."
(a) 830 qllïsl. 68h nl’- Ie al‘ n“ ¡an ‘v3 I l- IRJL.‘ ‘ya
x de los Santos Padres. 33 5
yan ‘examinado’ bien, y el entendimiento se . haya en
tregado del todo a sumayorinvestigacioná —‘ \
CAPITULO XVII.
. ú A i V ‘x
:1
-.-:
Í“! “¿FC T r -’-2 n‘:
(a) De uk: fina bom; cap: I‘. (b) Proleg. 6. «pa- 6. i: xr;
¿rieles Santos Padres. 34.3
fianza explicando esta doéirina , lo que seria una impie
dad pensar. Así el honor de la Iglesia está manifiesta
mentqempeñado con elrde San 1 Agustín , y separar
les seria una ímpiedad. Finalmente este Theologo, no
contento con haverse (explicado sobre las obras de
San Agustín en general en la materia de la Gracia,
viene particularmente a aquellas de donde se quiere
sacar especialmente sus prctendidas ínovaciones. Los
do: libro: ultimo: de San Agustín, de la Predestinaciorz,
y de la Ptrsevtrancia que escribió en su ultima vejez , son
como el Testamento de este Padre , y tienen ya no sé qué
de mas grande autoridad , asi» por haver sido trabajados
despues de una extrema aplicacion , y larga meditacion de
esta materia , como porque siendo el error de aquellos con
tra quienes escribía muy sutil, los compuso con mas pene
tracion. (a) Debe confesarse que nada hay que decir
sobre este asunto , ni mas expreso , ni fundado sobre
razones mas convincentes. Vazquez :‘ Vale mas seguir
Io: sentimiento: de Sanfzlgustin, que lo: de log demás en la
materia de la Gracia y dela Predestinacion: resplandece en
tre lo: Padre: , como el Sol entre lo: dem-d: astros; de don
de concluye , que aunque la autoridad de lo: otros Padres
debager de gray pesgïen todas la: ¡naterianen esta, que es
la¡d_e_\_la ¿Predestinacion ,‘_ sola Agustina , dice Vazquez,
te-rzdrti- el lugar deimuc/zo: Doctores, ‘porque de comun con
sentimiento de todo: lo: guejgzgan bien , aventaja en mu
do á 1Q’ dem‘? (blas: tuuuirx no: shut-t ' -' ‘dixit-us!
,-—.í, ‘Lap-Preferencia que. concedea ï-San Agustín sobre
losptrosPadres la aplica a los ¿ultimos libros del mís
moPadlfs GS decir, á los que escribió contra los Se
‘ .. .\ .3‘ :r y . mi.
m...
ÏÏÏH.
tkm-Ig. w ..-',‘:dlspo
In ¡O Part: 3- y muy
9.0. 1.4..
"(air
w“ huv- - imsn-—_—Lar-w_,a___gu——nh______
34.4. .Def'—er‘23et.’de“la‘TrÉza'ict‘0n, _
mípelqgianmos, sobre -to¿l_as‘ las demás obres sriyas‘; ‘y 693-7,
ta verdad expresamente reconocida por tantos Theoï
logos , deb: deaquiádelante r-pásar por muy-cierta. i
flAC-A«'PI‘TUïL'Q<XXIQ=
v f‘ et: uíntzvïzzsu 2 . v. . mi
, y » . , , . ‘ ‘¿ii ‘ . "a
“ .4 ¡,
efish
(n)? íHPomrl/ggaí
z. cap. 2g 6.11; ¡-."(b): Siijtniibs
m . ..g.*_:..1.';.u.r
;.cap: 8. a r
34,6 Defensa de‘ let-Tradicion,
ts acapázr‘ 11a ' úumaniddd ', nn" milagro de ‘la: doeïrínd;
sigue‘! cuyaqíoéïfina no: señala" losrterminosien que debe
iontenerse la Theologia; el. Aporta! de la Gracia ; el
Predicador ¿e14 Predeitiriacion; ‘la Biblioteca y-An
"senalrde Id Igíesiagïla ‘lengua de le verdddï; etrdyo
alfiler-heregías’; ldsilla- de-Ïzz sabiduría 5 ef oraeulo- de
‘trece siglo}; gel compendio de lo: Bañares antiguos; el
Seminariodonde ¡e han formado lo’: que le han sucedi
'do uíescabre “lo: Mysteriosude la Predestinacion y de la
íïracia‘ 46m0: áizlorrufidzzïezraavísto en Ia-«ízzteligehcia y
en el petzfámienzode Diosïmismo. (a)-:¿Qué querrían
-de'cii' estas ïgrandesy‘ magnificas palabras, si hallah.
semos que San Agustín fue un Novador en los dog
"mas que; masse aplicó á declarari. ¿J .
!-- Es irerdadÏqúee resteosabío._,hombre pone! ¿GS
excepciones enrsu díscúïso Lrlacunaz‘ e ‘si . se.‘ liallase
que San Agustín huvïese enseñadtflcosak contrarias. á las
decísionerde los Concilio; , ú de los: Papa: : la: otra,
‘si: áodorezlasíPzzdres , ú considerablemente '14 mayor patr
Ie de estos-Santo: DoóZofesÍle-son Ïconctaríor. (b). Re:
-t'rbo 1a condícíonf,.y. confieso solamentecon Sua
‘Iei que es el primero: que la dió,que esto se en‘
«Eontrará raramente ,, o Ïde ninguna mamra. Se en
icontrará tan raramente. ,, que ani el mismo Suarez,
ni ‘el? sabiorPadref Deschamps que. Ie ímító ¿ han no
tado nlgunexemplo ; de suerte, que de; buena fés es -
menester construir _este raramente de‘ ninguna-finance
‘ra; y reconocer que estas restricciones (‘es menes
seguirá San Agustín, girl: Iglesíahirehcomup
‘"3 l’ Í .\ m"; "de
_. t.—*°-"“a-“i¡imñm~u____
l
,7
(¿azar
-I;—Ín 4 . . ‘ , ' ' _‘ " ' ' .5?’ .'í.l}!.'s:ï
" " Ir
in; . 4'
20'39 ner‘ .
í 10?: ‘ Zu.’ 1
P ¿fi . - n‘h
_,‘ —
I ‘II, s’ (I: > 2;‘. a.
B23???‘ cm I ;; fl mu; 3 7
"-21 9 9“? ¿‘Á ri .-.x_.n1' .. -us¿zir.‘zlila'ia ie, HieÏ. o
-t, ‘j ‘ s
-—-0—v--"‘“4"0" '--- v- -—- ---—.—-_......-_... -.,.___..___. ,.___ ._, ._
de las cosa-sanïotables
que estableció , p. 304.
36st
¡:'p.i1.64.:En;qué consiste
Socinianos , sttfpretendida 3'13 utilidaddezsur meto
., _,
Iglesia no pudo soste ,'do:,—,¿a1li.un.¿; r , 13."...
rrnerse’, p, 1:31‘! Siïfixegfl Tertuliano , propcnefíla
mttardegenera tísíblenfií uoprudbaízrïeslas Profecías.
Í ZÍéÉÍAÏdÍs .g_¿borxxq-unqa,ipnuét’>aique
-; 01'03; p.31 321;‘): c; or! qqbligá a-‘créefigzpz n96.
er- fit. 1'» n.’ i’ ¿gil Como. maseseiíta de la
'_;I.P.,. lfT/¡iï f’: ti) r. dmecrrpr. sospecha',p.aBo.
-, J ‘.‘.',..;Ül)'l(.l uneivnoo Timlmaízafilïmcïscaïíozïsus
a r EadamfidezMopsqes cipaoafrasesrsobresSaPa
te ) f zexcomulgado -‘: sblóx,‘ y ‘¿sobrelas Epísto
-' por haver. ápartadrhy < =rlas Canonicas estimadas
s. buelto el sdntidoidcfi-¿las hide todoyel’ lmhndo muak
._ . Profecías, ¡531.78L;;En ¿agdritiqadasízpfigi MúSi
fseñólos mismosuzrrbres mmdxy, xpxq gerrírfr. : ziwg
r4! que Nesatoriosgrisepa Toz¿¿o(e1—,-scar’aem1u),ex
,. la ¿pefsona.=ad'e¿ Jesu -u ¡PIÍCÍ mSan Agustiniso
Christo , p.1 93g yapó. bre Iagirecesjdadíde la
T/zeo/ogia , menospreciada Eucharistía de una ma
por M. Simon, p. 144.. nera sólida , p. 29. Su
y sig. La de la Escritu explicacion es la de los
ra , y los Padres mas ne Cardenales Belarmino,
cesaria a los Prelados y Perron,y antes que
que todos los Cánones, estos de San Fulgencio,
p. r 59. No es arte, es p. 39. juzgada muy
la mas sublime de todas sutil por M. Simon,alli.
las ciencias, p. 16o. El Prefiere a San Agustín
fondo de la Theologia como el Doctor partí
Escolastica es el puro cular de la Gracia , p.
espíritu de la Tradi 341.
cion , y de los Padres, Trip0lz'(Pedro de) se glo
ría
2"" i . Índices :Í. fi»
36+ s ‘ A. . ' _.--.:,-_:y\
: ría no haver hecho otra |
Yann .0’:n s;
.
‘
1 ’1
r , - i“: l: 4.... ,1. e?“ 17m." . "—
'\
¿mq 1nd) >(í la cnica rslcelgau. si ¿>53 z han...
.q_ figure)- si ob ‘¡uïuo t_ muq lo a5 :‘.;Is‘auÏua.Íí
Jï-il JLDXT cl ab uahiriaz)
r / v“ : r
.. ¿3 9. , .. s....1,,.\,__un -L
¿’:2 inf? ¿of si) g ,'.'¡-'>Í'J
x
¿ii
v
nuvo
I
i!
¡I
ii.
i.
i
I!
l
l
i!
l
ii,
l
i