02-Estándares de Exactitud Posicional IG-2020

Universidad Loyola
Carrera Ingeniería en Topografía y Geodesia

Materia: Cálculo de Compensaciones
Tema: Estándares de exactitud posicional de cartografía y las normas ASPRS 2014 Ing. Miguel Angel Vera M.
Estándares de exactitud posicional de cartografía y las normas ASPRS 2014
1. Introducción
La Asociación para la Información Geográfica (AGI) define la Información Geográfica como “Información
sobre objetos o fenómenos que están asociados con una localización respecto a la superficie de la
Tierra”.
La Información geográfica (IG) es vital para tomar las decisiones acertadas a escala local, regional y
global. Los ejemplos de las áreas de aplicación son innumerables y esta importancia es más evidente
dentro del mundo global y tecnológico en constante evolución.
La información es un recurso costoso y, por esta razón, puede que la información apropiada y los me-
dios para utilizarla con la mayor eficacia pueden no estar fácilmente disponibles, o al menos su recopi-
lación puede que no sea tan directa como se tiende a imaginar en un primer momento.
En los tiempos de la cartografía tradicional, la obtención y distribución de IG solía estar altamente cen-
tralizada, o controlada por los gobiernos. Este modelo fue establecido desde el comienzo de la historia
de la cartografía y duró hasta tiempos recientes. Descentralizar el proceso era una posibilidad que
nunca había sido desafiada debido a los fuertes costos, a las tecnologías asociadas a la cartografía
tradicional y a lo prolongado de los proyectos cartográficos, que a menudo se extendían por varias
décadas. Tampoco los mapas eran necesariamente un producto de consumo, aunque eran considera-
dos parte de los valores nacionales o locales (datos utilizados principalmente por los gobiernos, para
defensa, impuestos, planificación y desarrollo). De ahí que los gobiernos determinaron la obtención de
información en formatos y clases específicas, requeridas para sus aplicaciones previstas.
Hoy, el tipo de aplicaciones y el uso que se hace de la IG ha crecido en forma exponencial. Se ha
convertido en sí misma en un producto de masas, estando integrada en soluciones informáticas de
software y hardware. Casi cualquiera puede crear sus propios mapas, gracias al uso de la cartografía
informática, posicionamiento satelital, fotografías aéreas e imágenes de satélite, escáneres aerotrans-
portados y programas inteligentes, etc. que aportan a los Sistemas de Información Geográfica (SIG) la
posibilidad de adquirir y gestionar un gran volumen de datos de forma rápida, eficiente y segura, pu-
diéndose obtener respuesta inmediata a consultas complejas, que de otra forma podrían tardarse me-
ses o incluso años en obtener.
Por lo tanto los SIG son, en su concepción más genérica, una forma particular de un sistema de gestión
de la información que permite administrar datos espacialmente referenciados y relacionados entre sí,
por lo tanto podemos considerarlo como una herramienta para la gestión de IG.
Los SIG son empleados en muchas áreas diferentes y en los más novedosos campos, suministrando
capacidades mejoradas de gestión de la IG a un reducido costo. No obstante, el costo global del desa-
rrollo de datos geoespaciales, requerido para soportar aplicaciones SIG, permanece relativamente alto
comparado con el hardware y el software requerido para administrar la información en un software de
SIG.
En los últimos años los usuarios del SIG tienden a desarrollar sus propios conjuntos de datos, a pesar
de la existencia de datos geoespaciales disponibles para ellos, generalmente por desconocimiento de
su existencia o por la incompatibilidad de los formatos de la información.
2. La Calidad de la Información Geográfica

Se entiende por calidad la “propiedad o conjunto de propiedades inherentes a una cosa, que permite
apreciarla como igual, mejor o peor que las restantes de la especie” (DEL).
La calidad de la IG, como en otros órdenes, es un proceso de evaluación fundamental que permite al
productor conocer el grado de cumplimiento de las especificaciones de su producto y al usuario le
permite decidir si dicho producto cumple con sus requisitos, especificaciones o expectativas.
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El uso creciente de la IG trae consigo que la información geográfica ha pasado a formar parte de
organizaciones y usuarios particulares no expertos en el tratamiento de la información geográfica, por
ello la calidad de los datos se hace más importante ya que datos de una mala calidad afectarán a un
mayor número de usuarios.
La democratización en el uso de datos geográficos georreferenciados, requiere que estos sean
interoperables; la interoperabilidad, entendida como la capacidad de intercambiar información entre
sistemas, puede ser analizada desde diferentes puntos de vista, datos, servicios, aplicaciones,
organizaciones, etc. pero también puede ser analizada desde distintos niveles, tecnológico, sintáctico,
y semántico.
El camino para conseguir la interoperabilidad pasa por la definición de normas y el uso de estándares
que permitan la integración y análisis de datos cartográficos.
La Norma ISO19113: Principios de Calidad. Establece los principios para describir la calidad de los
datos geográficos y especifica los componentes para informar sobre la calidad. También suministra una
aproximación para ordenar la información relativa a la calidad. Según esta norma los aspectos de
calidad de un conjunto de datos espaciales son:
a) Exactitud posicional: corresponde a los valores de la exactitud de las coordenadas, distinciones
entre la exactitud posicional relativa y absoluta, así como la exactitud posicional vertical y horizontal.
b) Exactitud temporal: refiere a la exactitud de las medidas en tiempo, su validación temporal, su
consistencia temporal, actualización, su índice de cambio y lapso temporal.
c) Exactitud temática: referida al valor del atributo del elemento geográfico, que pueden ser
categóricos o numéricos, donde el factor tiempo afecta
d) Compleción: es la medida de la ausencia de datos o la presencia de exceso de los mismos. La
calidad de dichos datos debe incluir información acerca de criterios de selección.
e) Consistencia lógica: esta corresponde a la fidelidad entre las relaciones codificadas en las
estructuras de datos (correspondencia en datos gráficos, topológicos, geometría, consistencia
topológica y semántica, en formato, dominio, etc. ).
f) Linaje: refiere al origen o la fuente de la información de la cual los datos fueron derivados, los métodos
de derivación, incluyendo todas las transformaciones que se efectuaron en dicho proceso.
Los datos digitales deben poseer los Metadatos, que es la información referida a los datos, y que
también es un índice de la calidad de la información, que incluyen:
- identificación
- calidad de los datos
- Sistema de referencia espacial
- Entidades y atributos
- Distribución
- Referencia de los metadatos
La Norma ISO19114: Procedimientos para la evaluación de la calidad, desarrolla las líneas a seguir
para los métodos que especifican y evalúan la calidad de los datos. Se trata de la obtención de índices
que indiquen la calidad de un conjunto de datos. El proceso se define con los siguientes pasos:
• Identificar un elemento, subelemento y ámbitos aplicables
• Identificar una medida de la calidad
• Seleccionar y aplicar un método de evaluación de la calidad
• Determinar el resultado de la calidad de los datos
• Determinar la conformidad
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Como consecuencia la realidad presente y próxima de los datos geográficos, la calidad general y en
concreto la calidad posicional requiere de la definición de estándares y metodologías que permitan tener
un conocimiento preciso de la exactitud posicional de los datos.
La localización y acceso a la información sobre la calidad es fundamental en los entornos de datos
geográficos desde dos puntos de vista, por un lado permite al productor conocer el grado de
cumplimiento de los datos y de esta manera asegurar que la producción se ha completado de un modo
correcto y por otro permite al usuario conocer las características de los datos geográficos que pretende
utilizar, y si de alguna manera cumplen sus expectativas y requerimientos.
Por otro lado el cambio tecnológico en la producción y uso de la IG supone el uso de diferentes capas
de información, con diversos modelos y métodos de captura, con lo que la escala o la identificación del
producto ya no son suficientes.
La geomática (cartografía, fotogrametría, geodesia, teledetección, topografía, sistemas de información
geográfica, etc.) está todavía alejada de los hábitos propios de la calidad, tal y como se entienden en
el resto de los procesos productivos. En geomática el aspecto posicional de la información espacial ha
sido tradicionalmente un elemento clave desde esta perspectiva de la calidad. Sin embargo, la IG tiene
muchas otras perspectivas (tema, tiempo, coherencia, etc.), y debe ser entendida de la misma manera
que un proceso industrial productivo, denominado en este caso como el “proceso de producción
cartográfica”. La geomática se basa en el uso de potentes equipos de hardware y software, pero estas
herramientas pueden ser utilizadas impropiamente o de forma incontrolada, degradando con ello la
calidad de los datos que se están procesando.
Por todo ello existe en la actualidad una acuciante necesidad de especialistas en calidad de la IG.
Puesto que los temas de calidad no se incluyen en los estudios universitarios y existe una clara
necesidad de formación, tanto práctica como teórica, en esta disciplina.
Dentro de los procesos de control de calidad, esta presentación se encuadra dentro de la determinación
de la calidad posicional que es una de las componentes de la calidad de los datos geográficos y viene
determinada por la exactitud posicional.
En el control posicional en la cartografía o base de datos geográficos debe considerarse un proceso de
evaluación de la calidad, con el objeto de decidir si dicho conjunto de datos cumple con los requisitos,
especificaciones o expectativas de un productor de IG o de un determinado grupo de usuarios.
La exactitud posicional se considera un aspecto definitorio y primordial de un dato geográfico o producto
cartográfico, la posición afecta no sólo a la geometría, sino a aspectos derivados de esta, la topología
y los aspectos temáticos. La posición también tiene una importancia fundamental ya que afecta en los
procesos de integración y la interoperabilidad entre recursos cartográficos procedentes de distintas
fuentes.
Con una norma de calidad, el responsable de los datos suministrará sus productos de acuerdo a
especificaciones y características conocidas, definidas previamente por la norma. Esta norma deberá
ser conocida por todos los usuarios de la información para, de esta forma, evaluar si los datos
geográficos cumplen las necesidades o expectativas que tiene el usuario respecto a los datos.
3. Determinación de la exactitud posicional de la Información Geográfica

Se admite que la vista humana normal puede alcanzar a diferenciar dos puntos en el papel cuando
éstos están separados una distancia de 0,2 mm. Para distancias menores, el ojo humano ve los dos
puntos superpuestos, como si fuera un solo punto. Este concepto es considerado el “error gráfico” ya
que se considera en un documento impreso en papel.
Pensemos que el portaminas o lápiz mecánico que usamos habitualmente emplea minas de diámetro
0,5 mm, y este diámetro es 2,5 veces mayor que los 0,2 mm que estamos considerando.
Cualquier longitud en el terreno será despreciable si al convertir a la escala del plano es igual o menor
que 0,2 mm. Igual tratamiento puede darse a los ángulos, siendo despreciables aquellos a los que
corresponda un arco que, a la escala del plano, determine puntos extremos dentro de los 0,2 mm.
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El producto de 0,2 mm por el denominador de la escala, determina la distancia en el terreno que resulta
despreciable a la escala de representación.
Este dato orienta tradicionalmente a los procesos de captura de todos los datos cartográficos, obtenidos
mediante topografía o fotogrametría, y en la cartografía analógica se suponía que se habían hecho de
una manera homogénea y todo el proceso de captura y procesamiento de los datos, independiente de
la metodología, debía cumplir con errores planimétricos determinados como:
Error planimétrico: 0,2 mm * D (denominador de la escala)
En la Tabla 1 podemos apreciar las distancias en el terreno y por lo tanto los errores en el terreno en
base al error gráfico para distintas escalas.
Definido el valor del “error gráfico”, este ocasiona, de inmediato, una restricción para una escala
determinada de plano o mapa, en la obtención de información en el terreno. De esta forma se puede
orientar, en una primera instancia de una manera realista la fase de toma de datos.
Tabla 1 – Errores posibles en el terreno según el error gráfico para distintas escalas
Escala Distancia en el terreno (m)

1 para una distancia de 0,2 mm
E= en el plano o mapa
D
1/500 100 mm = 0,10 m
1/1.000 200 mm = 0,20 m
1/2.000 400 mm = 0,40 m
1/5.000 1.000 mm = 1 m
1/10.000 2,000 mm = 2 m
1/25.000 5.000 mm = 5 m
1/50.000 10.000 mm = 10 m
1/100.000 20.000 mm = 20 m
De nada serviría tomar en campo las cuatro esquinas de una tapa de registro de alcantarillado, de
dimensiones 0,80 m x 0,80 m, si se pretende graficar la información a escala 1/5.000, pues los cuatro
puntos, en la representación gráfica, serán coincidentes, (0,80 m / 5.000 = 0,00016 m), resultando un
valor menor que 0,2 mm, por lo tanto en el caso que sea necesario representarla se lo hará mediante
un símbolo en las coordenadas del centro de la tapa.
Esta limitación visual da lugar a los símbolos o signos convencionales, que se utilizarán cuando sea
necesario representar, en el plano o mapa, detalles que no tengan representación gráfica a la escala
utilizada. Es decir, fijada la escala final de representación, todos aquellos detalles de dimensiones
menores que 0,2 mm necesitarán para su representación recurrir a símbolos o signos convenidos de
antemano.
Otro ejemplo, se requiere un levantamiento para el diseño de un camino a una escala 1:1.000, en la
que el límite de la percepción visual supone 0,2 m, tendríamos que levantar topográficamente los dos
bordes de un camino de ancho promedio 5 m, que en el plano aparecerían como dos líneas bien
diferenciadas, y separadas unos 5 mm, pero a una escala 1:50.000, en la que el límite de la percepción
visual supone 10 m, por el contrario, el camino se representaría por una sola línea, por lo que sería
suficiente levantar topográficamente su eje, con el consiguiente ahorro de tiempo y trabajo y por lo tanto
costo.
El límite de percepción visual se suele emplear como criterio básico para limitar las tolerancias de los
trabajos topográficos planimétricos. Las mediciones en campo y la transcripción de información en
gabinete, desde un enfoque gráfico planimétrico, están condicionadas por la escala y por el límite de
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percepción visual, este valor también se puede adoptar para definir la tolerancia de los errores
posicionales de un levantamiento, y su escala de representación. También este criterio es empleado
para determinar el control de calidad de un levantamiento, determinando generalmente una cantidad
de puntos bien identificados en el terreno y en el levantamiento, no menos de 20 puntos
homogéneamente distribuidos y se los mide con un método que asegure mayor precisión,
determinándose el error cuadrático medio en base a las coordenadas de los puntos medidos, por
ejemplo con GPS y sus coordenadas en el plano, normalmente digital, y este valor debe ser igual o
menor que 0,2 mm por el denominador de la escala de publicación.
Es por ello que, en primera aproximación, la tolerancia, o error máximo admisible en un trabajo
topográfico, fotogramétrico o de teledetección dependerá, por las mismas razones, de la escala de
representación del plano final. La tolerancia fijada para un trabajo de levantamiento topográfico no será
menor que el límite de la percepción visual multiplicado por el denominador de la escala final de
representación.
Si bien en los trabajos topográficos digitales, ya sea en un Diseño Asistido por Computadora (CAD) y/o
en los Sistemas de Información Geográfica (SIG), se menciona que no existe una escala y que los datos
están 1/1, es necesario definir la escala máxima de representación, para determinar el método de
captura de datos y las precisiones y exactitudes de los levantamientos topográficos para su
representación cartográfica y por lo tanto la tolerancia en el control de calidad del levantamiento.
Para los datos geográficos altimétricos tradicionalmente se consideró que el error en altura podía ser
considerado como 1/3 de la equidistancia de las curvas de nivel (ecn) o intervalo altimétrico entre curvas
de nivel, como se aprecia en la Tabla 2.
Error altimétrico: 1/3 * ecn
Tabla 2 – Errores altimétricos en función a la equidistancia de las curvas de nivel
equidistancia en las Errores altimétricos

curvas de nivel (m) aceptables (m)
0,50 0,17
1 0,33
5 1,67
10 3,33
20 6,67
50 16,7
100 33,3
La forma de determinar la calidad de los datos es la realización, en el area del levantamiento, perfiles
longitudinales con métodos que aseguren una mayor precisión y exactitud y comparar las alturas del
levantamiento con las de control determinando las diferenicas y comparando con los requerimientos
estipulados.
En trabajos topográficos para construcción de sitios, urbanizaciónes, obras importantes de ingeniería,
etc., pueden requerirse planos con curvas de nivel cada 0,5 m, por lo tanto la precisión de los datos
deberán ser mejores que 0,17m.
En trabajos de ingeniería civil para carreteras es habitual que se requieran planos con equidistancias
cada 1 m, por lo tanto los controles de calidad deberían dar resultados menores a 0,33 m que
permitirábn los cálculos de diseño de la obra y los movimientos de suelos a realizar.
En el caso de cartografía oficial de Bolivia a la escala 1:50.000, la altimetría se representa habitualmente
con curvas de nivel cada 20 m, por lo que se debería adoptar un modelo digital del terreno que asegure
exactitudes mejores que 7 metros.
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Si bien pocos organismos de producción de información geográfica (cartografía) realizaban o realizan

procedimientos para la evaluación de la calidad del producto y menos aún lo daban o lo dan a conocer
en los documentos impresos.
En la actualidad resulta complicado conocer la exactitud de un producto cartográfico ya que existe cierto
hermetismo por parte de los productores en identificar la calidad de su producto, las razones de este
hecho son múltiple, falta de compromiso, falta de documentación, falta de transparencia, etc (Ariza-
Atkinson), si bien este comentario es realizado por especialistas españoles tiene plena vigencia para la
mayoría de los países centro y suramericanos, habría que agregar como una causa importante que
probablemente no fue previsto en los costos del proyecto la realización de un trabajo de campo para el
control de la calidad del producto cartográfico.
Es por ello que es un hecho habitual que el modo de acercamiento del usuario a la exactitud posicional
es relacionar escala y precisión. Dada la actual coyuntura donde los productos cartográficos son
derivados de diferentes fuentes, con resoluciones y precisiones no correlacionadas hacen que esta
relación sea únicamente orientativa.
Muchas son las normas o estándares para determinar la calidad posicional de un dato geográfico, la
mayoría generadas en EEUU, pero en Bolivia no se ha adoptado oficialmente ninguna en especial, es
por ello que en este caso se analizarán los estándares de la Sociedad Americana de Fotogrametría y
Sensores Remotos (American Society for Photogrammetry and Remote Sensing - ASPRS), que ha sido
y es un referente importante a nivel internacional.
En 1990 la ASPRS estableció un estándar denominado Spatial Accuracy Specification for Large Scale
Topographic Maps que especifica la exactitud de los mapas topográficos a escala grande.
El método consiste en la comparación de puntos bien identificados en la cartografía y en el terreno con
fuentes de mayor exactitud, comparando la componente horizontal y vertical de forma independiente.
Se establecen clases de calidad en base al Error Cuadrático Medio (ECM) para las componentes X y
Y, por separado según la escala del mapa, como se puede observar en la Tabla 3:
Tabla 3: Especificaciones de exactitudes en planimetría
Clase 1 Clase 2 Clase 3

Escala
(en metros) (en metros) (en metros)
1:50 0,0125 0,025 0,038
1:100 0,025 0,05 0,075
1:200 0,050 0,10 0,15
1:500 0,125 0,25 0,375
1:1.000 0,25 0,50 0,75
1:2.000 0,50 1,00 1,5
1:5.000 1,25 2,5 3,75
1:10.000 2,5 5,0 7,5
1:20.000 5,0 10,0 15,0
1:25.000 6,25 12,5 18,75
1:50.000 12,5 25,0 37,5
Si analizamos los valores podemos reemplazar los cálculos por la siguiente fórmula
ECM en X o Y = N * 0,00025 m * D
Donde N es el Número de Clase y D el denominador de la escala del producto final
En altimetría se considera el ECM en Z en base a la equidistancia de las curvas de nivel (ecn) o en
base a modelos digitales del terreno (MDT), la Tabla 4 muestra los valores como ejemplo.
Tabla 4 - Especificaciones de exactitud vertical.
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Equidistancia Levantamientos Topográficos Modelos Digitales del Terreno

de las curvas ECM en Z (en metros) ECM en Z(en metros)
de nivel (m) Clase 1 Clase 2 Clase 3 Clase 1 Clase 2 Clase 3
0,10 0,03 0,07 0,10 0,02 0,03 0,05
0,20 0,07 0,13 0,2 0,03 0,07 0,10
0,25 0,08 0,17 0,25 0,04 0,08 0,12
0,5 0,17 0,33 0,50 0,08 0,17 0,25
1 0,33 0,66 1,0 0,17 0,33 0,50
2 0,67 1,33 2,0 0,33 0,66 1,0
4 1,33 2,67 4,0 0,67 1,33 2,0
5 1,67 3,33 5,0 0,88 1,67 2,5
10 3,33 6,67 10,0 1,67 3,33 5,0
Fórmula ECM en Z = N*1/3 *ecn ECM en Z = N*1/6 *ecn
general
Donde N es el Número de clase y ecn es la equidistancia de las curvas de nivel.

En la acualidad los levantamientos topográficos se realizan con distintos métodos, sean estos con
estación total o barredores laser fijos o móviles (Lidar), o métodos fotográmétricos o lidar con cámaras
métricas o empleando pequeñas cámaras montadas en un véhiculo aéreo no tripulado (VANT) también
conocidos como drones, generándose un MDT en base a los puntos y luego el software genera las
curvas de nievel y habitualmete es necesario un análisis de las curvas generadas y los posibles errores
generados por el software en la generación de las curvas. Es evidente que cuando mayor sea la
cantidad de puntos y mejor su exactitud, mejor será la representación de la superficie terrestre.
En la norma ASPRS se permite que un producto cumpla los requisitos de una clase en planimetría y
otra en altimetría.
El procedimiento a adoptar para analizar la calidad posicional de los datos es el siguiente:
1. Seleccionar una muestra de no menos de 20 puntos de control, obtenido con equipamiento y
métodos de mayor confiabilidad y distribuidos homogéneamente en el área del levantamiento,
sin interesar el tamaño del área. Los puntos se deberán distribuir de forma que en cada uno de
los cuadrantes del mapa se sitúen al menos un 20% de los mismos. De la misma forma, la
separación entre los puntos no será inferior a una décima parte de la diagonal del mapa a con-
trolar como se muestra en la Figura 1. Dado el método de levantamiento elegido es necesario
plantear la toma de un cierto número de datos mayor, dado que podría ser necesario eliminar
datos con errores groseros o equivocaciones.
2. Detectar y corregir los errores previos de inconsistencias o equivocaciones, etc.
3. Calcular el ECM para cada componente (X,Y,Z) por separado.
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Figura 1 – Distribución homogénea de los puntos de control

Analizamos los conceptos anteriores con un ejemplo, supongamos que se quiere realizar el control de
calidad de una hoja cartográfica a escala 1:50.000, que en el caso de Bolivia tiene un formato de 15’ en
la dirección este-oeste por 10’ en la dirección norte sur, que aproximadamente cubre una superficie de
27.000 m x 18.000 m, por lo tanto la diagonal C será de 32.450 m, por lo tanto es aconsejable que la
distancia entre los puntos de control esté en el orden de 3 km.
Si se adopta determinar 25 puntos, para descartar puntos que no tienen buena identificación, en cada
cuadrante de la hoja se debe tener no menos de 5 puntos que se encuentren bien identificados en la
hoja cartográfica y que no genere dudas que es el punto que se mide en el terreno.
El método del levantamiento de control está en función de la Clase asignada previamente al proceso
cartográfico tanto en planimetría como en altimetría y determinar el ECM para cada coordenada por
separado.
Una vez determinada la calidad, es necesario mostrar en la impresión gráfica o en los metadatos
digitales en que Clase se considera la exactitud posicional correspondiente.
Como podemos apreciar, esta norma tiene su origen en las consideraciones de la cartografía tradicional,
donde se da mucha importancia la escala final de publicación, y fueron diseñadas para hacer frente a
los mapas de líneas impresos ya que era el único medio para representar datos geoespaciales.
En el año 2004 la ASPRS publicó normas para Reportes de Exactitud Vertical de Datos Lidar.
En Noviembre de 2014 la ASPRS luego de una versión preliminar dada a conocer, publicó nuevas
Normas de Exactitud Posicional de Datos Geoespaciales Digitales (ASPRS Positional Accuracy
Standards for Digital Geospatial Data). Esta norma fue desarrollada por el Grupo de Trabajo de Normas
de Exactitud Cartográfica del ASPRS, que se formó con el propósito de revisar y actualizar las normas
ASPRS de exactitud cartográfica de modo que se reflejen en ellas las tecnologías actuales. En el sitio
Web se puede bajar el documento.
http://www.asprs.org/PAD-Division/ASPRS-POSITIONAL-ACCURACY-STANDARDS-FOR-DIGITAL-
GEOSPATIAL-DATA.html
El objetivo de estas nuevas normas ha sido reemplazar las Normas ASPRS de Exactitud de Mapas a
Escalas Grandes (1990), y las Directrices de Reportes de Exactitud Vertical de Datos Lidar (2004) para
abordar la mejora en las tecnologías actuales.
Estos nuevos estándares incluyen las normas de exactitud posicional para datos digitales provenientes
de ortoimágenes (Fotografías Aéreas o Imágenes de satélites), datos planimétricos vectoriales y datos
de elevación, donde las clases de exactitud están basados en los valores del Error Cuadrático Medio
(ECM), de esta manera se ha revisado y actualizado la norma de 1990 para hacer frente a los mayores
precisiones alcanzables con las nuevas tecnologías. La norma también incluye medidas de exactitud
adicionales, tales como:
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- las líneas de unión de mosaicos de ortoimágenes,

- exactitud de procesos de aerotriangulación,
- exactitud de datos obtenidos con tecnología LIDAR,
- exactitud horizontal de datos de elevación
- delimitación de zonas con distinto nivel de confianza para datos verticales
- la cantidad y distribución espacial de los puntos de control basados en la superficie que cubre
determinado proyecto.
En los 25 años que pasaron entre las dos normas se tienen en cuenta los más recientes avances en
las tecnologías que permiten producir una mejor calidad y una mayor precisión y exactitud en lo
productos geoespaciales digitales para la producción de mapas.
La nueva exactitud cartográfica está influenciada por muchos factores tales como:
- la calidad de los parámetros de calibración de los sensores fotogramétricos, tanto aéreos como
espaciales.
- calidad y tamaño de sensor que utiliza la matriz CCD (Charged Coupled Device) de la cámara o el
sensor remoto digital.
- cantidad de superposición de las imágenes.
- calidad de la señal GPS y calidad y densidad de los controles en tierra.
- calidad de la solución de la aerotriangulación
- la obtención de modelo digital del terreno con distintas tecnologías utilizado para la producción de
ortoimágenes.
- Los productos de elevación, sean Modelos Digitales de Superficie (MDS) o Modelos Digitales del
Terreno (MDT) obtenidos con las nuevas tecnologías y los sensores activos tales como Lidar e
IFSAR que no eran considerados por las normas anteriores.
- Los umbrales exactitud posicional son independientes del tamaño del pixel, de la escala del mapa
y de la equidistancia de las curvas de nivel.
Esta norma define las clases de exactitudes basadas en umbrales del ECM para ortoimágenes, datos
planimétricos y datos elevación en formatos digitales.
En la prueba o test para determinar la calidad del producto se recomienda siempre, pero puede no ser
necesaria para todo el conjunto de datos, requisitos que deben ser abordados y claramente en las
especificaciones técnicas del proyecto.
Cuando se requiere un test de evaluación de la calidad del producto, la exactitud horizontal se
determinará según la comparación de las coordenadas planimétricas de puntos bien definidos en el
documento con coordenadas determinadas con los mismos puntos en la tierra, con datos independiente
y de mayor exactitud. La fuente independiente de mayor precisión para los puntos de control será
al menos tres veces más precisa que la precisión requerida de la datos geoespaciales que se
están verificando.
La exactitud vertical deberá ser comprobada mediante la comparación de las elevaciones de la
superficie representada por el conjunto de datos con elevaciones determinadas a partir de una fuente
independiente de mayor exactitud. Este es realizado mediante la comparación de las elevaciones de
los puntos de control con elevaciones interpoladas a partir del conjunto de datos en las mismas
coordenadas.
Todas las exactitudes se asumen en relación con el dato publicado y la red de control en tierra utilizada
para el conjunto de datos y debe estar especificado en los metadatos.
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Las exactitudes, precisiones y procesos de los puntos de control en tierra deben establecerse sobre la
base de los requisitos del proyecto y deben estar claramente identificados, tanto en las especificaciones
del proyecto como en los metadatos.
La exactitud horizontal se evaluará mediante el ECM en el plano horizontal, es decir, ECMx, ECMy y
ECMr. La Exactitud Vertical se evaluará sólo en la dimensión z, pudiendo comprobarse la exactitud
horizontal cuando sea posible.
Para el testeo de exactitud vertical se utilizan diferentes métodos, según sea un terreno sin vegetación,
donde los errores típicamente siguen una distribución normal. Cuando los errores no pueden ser
representados por una distribución normal, el valor Percentil 95 estima la precisión a un nivel de
confianza del 95%
Por estas razones la exactitud vertical se evalúa a través de las estadísticas en ECMz en terrenos sin
vegetación y en terrenos con vegetación se emplearán las estadísticas de Percentil 95.
Con la excepción de datos verticales en terrenos con vegetación, los umbrales de error se presentan
en términos de valor ECM aceptable. Para las correspondientes estimaciones de exactitud se calculan
valores de nivel de confianza del 95%
Esta norma define clases de Exactitud Horizontal en términos de sus valores ECMx y ECMy, dado que
muchas aplicaciones modernas requieren más flexibilidad que estas clases permitidas en las normas
anteriores, como se muestra genéricamente en la Tabla 5, mientras que las Normas ASPRS anteriores
se utilizaban rangos numéricos para las clases de exactitud en base a la escala del mapa (es decir,
Clase 1, Clase 2 ó Clase 3), Además, muchas aplicaciones de exactitud horizontal pueden no estar
vinculadas directamente a la escala de compilación, la resolución de las imágenes fuente, o la
resolución del pixel definitivo.
Tabla 5 – Generalización de las Clases de Exactitud Horizontal
Clases de Exactitud Horizontal Mosaicos de
ECMx y ECMy
Exactitud ECMr (cm) con nivel de confianza ortoimágenes en la zona
(cm)
Horizontal de 95% (cm) de unión o costura (cm)
X-cm ≤X ≤1.41*X ≤2.45*X ≤ 2*X
Por ejemplo para un determinado trabajo, se puede especificar que en las ortoimágenes digitales, los
datos planimétricos digitales, o mapas a escala deben ser producidos para satisfacer Normas de
Exactitud Horizontal ASPRS con ECMx y ECMy de 10 cm como Exactitud Horizontal de la Clase, esto
muestra que ya no está limitado a 3 clases sino que es para ilimitadas clases, según los requerimientos
técnicos del trabajo, como se aprecia en la Tabla 6.
Tabla 6 – Ejemplos de diferentes Clase de Exactitud Horizontal
Clases de Exactitud Exactitud Horizontal Mosaicos de

ECMr
Horizontal con con nivel de confianza ortoimágenes en la zona
(cm)
ECMx y ECMy (cm) de 95% (cm) de unión o costura (cm)
5 7.1 12.2 10.0

10 14.1 24.5 20.0
15 21.2 36.7 30.0
20 28.3 49.0 40.0
30 42.4 73.4 60.0
60 84.9 146.9 120.0
100 141.4 244.8 200.0
200 282.8 489.5 400.0
500 707.1 1223.9 1000.0
1000 1414.2 2447.7 2000.0
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Las recomendaciones de ECMx y ECMy para ortoimágenes digitales de varios tamaños de pixel, que
sean obtenidas con cámaras aéreas digitales o con sensores remotos satelitales se presentan en la
Tabla 7. Estas relaciones recomendadas de ECMx y ECMy y tamaño de píxel están basadas en el
estado actual de las tecnologías y pueden cambiar en el futuro a medida que las tecnologías de mapeo
sigan avanzando y evolucionando.
Las tecnologías de sensores y procesamiento en las actuales cámaras métricas para formatos medios
y grandes, una precisión ortoimágenes de un píxel ECMx y ECMy se considera factible. Este nivel de
exactitud es el doble más más riguroso respecto de exactitudes en ortoimágenes según las exactitudes
de la Clase 1-ASPRS 1990 .
Lograr el más alto nivel de precisión requiere una consideración especial relacionado al tipo de sensor,
densidad de control en tierra, exactitud de los puntos de control de tierra, y el diseño general del
proyecto. En muchos casos, esto resulta en un mayor costo. Como tal, cuanto mayor las exactitudes
alcanzables pueden no estar apropiado para todos los proyectos. Muchos proyectos de mapeo
geoespaciales requieren alta resolución e imágenes de alta calidad, pero no requieren el más alto nivel
de exactitud posicional.
En la Tabla 7 se proporciona una guía general para determinar una adecuada clase de ortoimágenes
para tres diferentes niveles de exactitud geoespacial. Los valores que figuran como "trabajo de alta
exactitud" especifican la clases de exactitud con ECMx y ECMy de un píxel (o mejor) y se considera que
refleja la exactitud de nivel más alto para la resolución especificada dada las tecnologías actuales. Esta
clase de exactitud es adecuada cuando son de mayor importancia las exactitudes geoespaciales y
cuando son compatibles con una sensor que permita estas resoluciones, un control en tierra compatible
y adecuados modelos de digitales del terreno. Los valores que figuran como "Cartografía estándar y
trabajos con SIG" especifican un clase de precisión en ECMx y ECMy de 2 pixeles, esta exactitud es
apropiado para un nivel estándar de buena exactitud en aplicaciones de mapas geoespaciales de alta
calidad, que es equivalente a las exactitudes de Clase 1 del ASPRS 1990. En trabajos para
“Visualización y trabajos de menor exactitud”, según la interpretación de los requerimientos del usuario,
con un nivel de exactitud de una gran mayoría de los proyectos existentes con ECMx y ECMy de 3 o
más píxeles cuando no se necesitan exactitudes superiores.
Los usuarios deben ser conscientes de que el uso del símbolo ≥ (mayor o igual) en la Tabla 7 pretende
inferir que los usuarios pueden especificar valores de umbral más grandes para ECMx y ECMy y el
símbolo ≤ (menor o igual) indica que los usuarios pueden especificar umbrales más bajos en el
momento en que pueden ser apoyados por las tecnologías actuales o futuras.
Los tamaños de píxel en ortoimágenes y clases de exactitud en base a ECMx y ECMy se basan en gran
medida en la experiencia con tecnologías de sensores y se aplican principalmente a cámaras métricas
en formatos grandes y medianas, pero también para sensores remotos satelitales de alta resolución.
La tabla se ofrece como una guía para los usuarios durante el período de transición a la nueva norma.
Estas asociaciones pueden cambiar en el futuro a medida que las tecnologías de mapeo continúan
avanzando y evolucionando.
La exactitud vertical se calcula utilizando estadísticas de ECM en terrenos sin vegetación con nivel de
confianza de 95% y en terrenos con vegetación estadísticas de Percentil95. La determinación para cada
clase de precisión vertical se asocia directamente con el ECM que se espera a partir del producto. En
la Tabla 8 se muestra la generalización de las clases de exactitud para distintos datos digitales de
elevación.
A diferencia de los puntos de control horizontales, para los puntos de control verticales no son
requeridas necesariamente entidades de puntos claramente definidos o fácilmente identificables y se
establecerán en lugares que minimicen errores de interpolación cuando se comparan elevaciones
interpoladas a partir del conjunto de datos de elevaciones de los puntos de control.
Los puntos de control verticales deberán ser objeto de reconocimiento en terreno plano abierto sin
vegetación o terreno uniformemente inclinado y con pendientes menores de 10% y deben evitarse
lugares elevados o con cambios abruptos en elevación.
11
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Tabla 7 – Ejemplos de recomendaciones de diferentes Clase de Exactitud Horizontal y su relación con

el tamaño de pixel
Exactitud Horizontal Ortoimagen con

Tamaño del
recomendada para ECMx y ECMy
Pixel en la Uso Recomendado
Clases con ECMx y en término de
Ortoimagen
ECMy (cm) pixel
≤2,5 ≤1-pixel Trabajos de alta exactitud
2,5 cm 5,0 2-pixels Cartografía estándar y trabajos con SIG
≥7,5 ≥3-pixels Visualización y trabajos de menor exactitud
5 cm 10,0 2-pixels Cartografía estándar y trabajos con SIG
≤10 ≤1-pixel Trabajos de alta exactitud
≥30 ≥3-pixels Visualización y trabajos de menor exactitud
Tabla 8 – Clases de exactitudes verticales
Exactitud Absoluta Exactitud Relativa (donde sea aplicable)
Franja a
Clases Dentro de las
ECMz para Franja a Franja
de Percentil95 Franjas
terrenos Nivel de Franja
Exactitu en terrenos en terrenos
sin confiabilidad Exactitud en
d con ECMz en sin
vegetació del 95% en superficie
Vertical vegetación terrenos sin vegetación
n (NVA) - NVA - (cm) dura (Máxima
(VVA) - (cm) vegetación (Máxima
(cm) Diferencia)
(cm) Diferencia)
(cm)
(cm)
X-cm ≤X ≤1.96*X ≤3.00*X ≤0.60*X ≤0.80*X ≤1.60*X
Se entiende por exactitud absoluta una medida que da cuenta de errores aleatorios en un conjunto de
datos y como exactitud relativa una medida de la variación de la precisión punto a punto en un conjunto
de datos.
En la Tabla 9 se presentan ejemplos de Clases de Exactitud Vertical con sus valores en distintas
situaciones.
12
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Tabla 9 – Ejemplos de exactitudes verticales para diferentes clase

Exactitud Absoluta Exactitud Relativa (donde sea aplicable)
Franja a
Dentro de las Franja a
Clases de Franja
Percentil95 Franjas Franja
Exactitud ECMz para Nivel de en terrenos
en terrenos Exactitud en ECMz en
Vertical terrenos sin confiabilidad sin
con superficie dura terrenos
(cm) vegetación del 95% en vegetación
vegetación (Máxima sin
(NVA) - (cm) NVA - (cm) (Máxima
(VVA) - (cm) Diferencia) vegetación
Diferencia)
(cm) (cm)
(cm)
1 1 2 3 0.6 0.8 1.6
2,5 2,5 4,9 7.5 1.5 2 4
5 5 9,8 15 3 4 8
10 10 19,6 30 6 8 16
15 15 29,4 45 9 12 24
20 20 39,2 60 12 16 32
33,3 33,3 65,3 100 20 26.7 53.3
66,7 66,7 130,7 200 40 53.3 106.7
100 100 196,0 300 60 80 160
333,3 333,3 653,3 1000 200 266.7 533.3
Con respecto a la Densidad y Distribución de Puntos de Control, la Norme ASPRS 2014 establece
que cuando se va a realizar el testeo de calidad, la distribución de los puntos de control para un proyecto
específico debe ser determinado por mutuo acuerdo entre el proveedor de datos y el usuario final. En
ningún caso la exactitud de ortoimágenes digitales o la exactitud de los datos planimétricos debe estar
basado en menos de 20 puntos de control.
Una metodología para proporcionar caracterización cuantitativa y la distribución espacial de los puntos
de control en toda la extensión del proyecto, es necesario tener en cuenta el tipo de cobertura de la
tierra y la forma del área del proyecto y debe ser necesariamente realista.
En esta nueva norma se establece que la cantidad de puntos es función de la superficie a representar
y por supuesto si es un control solamente horizontal o planialtimétrico, donde se considera también el
tipo de cobertura de vegetación, se muestra un ejemplo en la Tabla 10.
La superficie base a tener en cuenta es de 500 km2, con un mínimo de 20 puntos, aumentando
proporcionalmente con el aumento de la superficie.
Para dar una idea de la superficie máxima del área mínima a considerar, es la superficie aproximada
que cubre una hoja topográfica a escala 1:50.000 con los formatos oficiales del IGM, que como se
mencionó anteriormente para latitudes medias de Bolivia es de aproximadamente 27 km x 18 km (486
km2) mientras que para una hoja con formatos de escala 1:100.000 de 30’ x 30’, es de aproximadamente
3.000 km2 y que requiere más de 100 puntos de control planialtimétrico para testear la calidad del
documento cartográfico digital, definiendo claramente las exactitudes posicionales que se requieren en
cada proyecto según los fines del mismo. Teniendo en cuenta que estos puntos de control no tienen
que ser considerados en los procesos y metodologías para la obtención de la información geográfica,
sino que son independientes y sirven para determinar la calidad posicional del producto final.
13
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Tabla 10 – Cantidad de puntos de control en función de la superficie

Exactitud
Horizontal
Número de puntos de control para determinar
para testear
Exactitud Vertical y Horizontal de conjunto de datos
Ortoimágenes
de Elevación
y documentos
Area del planimétricos
Proyecto
(km2) Total de Número de
Puntos de Número de puntos de
Número Total
Control puntos de control control en
de puntos de
claramente en terrenos sin terrenos con
control
definidos en vegetación (NVA) vegetación
2D/3D (VVA)
≤500 20 20 5 25
501-750 25 20 10 30
751-1000 30 25 15 40
1001-1250 35 30 20 50
1251-1500 40 35 25 60
1501-1750 45 40 30 70
1751-2000 50 45 35 80
2001-2250 55 50 40 90
2251-2500 60 55 45 100
En la Norma ASPRS analizada se consideran otros aspectos, que no se están contemplando en esta
presentación, dado el detalle que habría que abordar como son los resultados del proceso de los puntos
de la aerotriangulación para fotogrametría digital empleando cámaras en formato grande y mediano y
de los puntos de control terrestre y del tamaño del pixel en el terreno, tanto para datos vectoriales como
raster y en el caso de empleo de tecnologías Lidar para la generación de MDT y MDS, la altura de vuelo
de la aeronave, la cantidad de pulsos del sensor y de los componentes que integran el Sistema Lidar,
como son las exactitudes de sistema GPS de sensor Lidar, como también de los resultados de sensor
IMU (Unidad de Movimiento Inercial) y que deberán ser tenido en cuenta y analizado con cuidado en
los momentos de la planificación del proyectos y del control de calidad del producto final.
4. Conclusiones y Recomendaciones
De los conceptos anteriores se pueden sacar las siguientes conclusiones y recomendaciones:
1) En todo proyecto de obtención de datos planialtimétricos para la generación de cartografía que
posteriormente integrará un Sistema de Información Geográfica hay que definir con anticipación a
la obtención de los datos las exactitudes posicionales, horizontales y verticales que se requieren,
para determinar la metodología, procesos y tipo de información para cumplir con los requerimientos
técnicos.
2) Durante el procesamiento de los datos se requiere que el productor de la información realice un
control de calidad de la exactitud posicional lograda y dicha información integre los datos requeridos
en los metadatos.
3) El usuario necesita conocer la calidad posicional de la información a emplear y en muchos casos
realizará su propio control de calidad para la aceptación de la información geográfica.
4) En muchos proyectos el productor y el usuario deben acordar de antemano los requerimientos
técnicos de exactitud posicional del producto final, ya que en base a esos requerimientos saldrán
los costos de obtención de la información geográfica.
14
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5) Es necesario establecer estándares o normas nacionales y/o internacionales a aplicar en cada

caso.
6) En principio si no existen estándares o normas nacionales es posible emplear las establecidas en
la norma ASPRS de Exactitud Posicional de Datos Geoespaciales Digitales (ASPRS Positional
Accuracy Standards for Digital Geospatial Data) V1.0 de noviembre de 2014.
7) Para entender y validar en Bolivia las referidas normas es necesario que los profesionales dedica-
dos a la obtención, administración y empleo de información geográfica profundicen el conocimiento
de estas nuevas normas.
Esto muestra que es necesario normalizar los procesos de obtención de datos planialtimétricos de IG y
la necesidad que existe en la evaluación de los productos cartográficos y sus derivados, cualquier tipo
de información o base de datos georreferenciados y por supuesto esto requiere la necesidad de formar
en la materia al personal técnico y directivo que interviene en la producción de IG.
Bibliografía
- ASPRS Spatial Accuracy Specification for Large Scale Topographic Maps – 1990
- ASPRS Positional Accuracy Standards for Digital Geospatial Data – 2014
- Familia Normas ISO 19100 – Información Geográfica – Varios
- Instituto Colombiano de Normas Técnicas y Certificación - ICONTEC y el Comité Técnico de
Normalización de Información Geográfica 028 –CTN028 – Colombia – 2015 - Pagina Web
- Positional Accuracy Handbook - Using the National Standard for Spatial Data Accuracy
(NSSDA) to measure and report geographic data quality – USA 1999
- Informe al CT-148 de AENOR – Metodología de Control Posiciona: Visión General y Análisis
Crítico – Ariza F., Atkinson A. – España 2006
15

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Carrera Ingeniería en Topografía y Geodesia

Estándares de exactitud posicional de cartografía y las normas ASPRS 2014

2. La Calidad de la Información Geográfica

3. Determinación de la exactitud posicional de la Información Geográfica

Escala Distancia en el terreno (m)

equidistancia en las Errores altimétricos

Si bien pocos organismos de producción de información geográfica (cartografía) realizaban o realizan

Clase 1 Clase 2 Clase 3

Equidistancia Levantamientos Topográficos Modelos Digitales del Terreno

Donde N es el Número de clase y ecn es la equidistancia de las curvas de nivel.

Figura 1 – Distribución homogénea de los puntos de control

- las líneas de unión de mosaicos de ortoimágenes,

Clases de Exactitud Exactitud Horizontal Mosaicos de

5 7.1 12.2 10.0

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Exactitud Horizontal Ortoimagen con

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Exactitud Absoluta Exactitud Relativa (donde sea aplicable)

X-cm ≤X ≤1.96*X ≤3.00*X ≤0.60*X ≤0.80*X ≤1.60*X

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