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Bryce Barton

Bryce Barton nace el 12 de agosto de 1998 en el estado de Michigan, concretamente


en la ciudad de Detroit en el hospital “DMC Detroit Receiving Hospital”. Es el hijo mayor de
Axel Barton, un hombre con una vida muy humilde que desde siempre se crio en Detroit, y de
Bestie Barlow, una camarera en un bar cercano a la calle donde mi padre pasó toda su vida
llamado Baker’s Leyboard Lounge.

En la familia eran tres hermanos, sin embargo, Bryce solo guardaba una relación
cercana con su hermano mediano, Jayce, el cual defendía a toda costa y tenía un ojo siempre
sobre su espalda para evitar que le pasara nada malo. Bryce era un chico de tez negra, con los
ojos verdes llegando casi a lima, tenía los labios bastante gruesos, lo que le hacía bastante
llamativo y solía ir todo con el pelo rapado y una barba bien delineada.

Desde bien pequeño fue muy selectivo, no solo con esto, era muy fácil diferenciar si le
caías bien o no solo por la expresión de su cara ya que no es un chico que se guarde las cosas.
Siempre ha sido muy directo y dice las cosas como las piensa y cuando cree conveniente que
tiene que decirlas, pero también sabe mantenerse en silencio cuando debe. Este carácter suyo
siempre le hizo tener muy pocos amigos, pero los que tenía sabía que podía confiar en él
juntándose sobre todo con lo que su padre llamaba familia, es decir, la gente del barrio.

Su educación nunca fue nada fácil, debido a la situación económica de su familia, con
unos ingresos mínimos y la falta de ayudas por parte del estado, Bryce se vio obligado a ir a las
peores escuelas que había en la ciudad, siempre en un ambiente conflictivo como su barrio y
con amistades poco saludables.

En la infancia se hizo muy amigo de los chicos del barrio, se pasaba el día con las bicis y
jugando en las canchas mientras sus padres disfrutaban viéndolo con los demás adultos. Ahí
fue donde conoció a Jane, cuyos padres también habían pasado toda la vida en el Grove y que
eran íntimos de Axel y Bestie, los padres de Bryce además de a Brook, el que más adelante se
convertiría en su mejor amigo.

Cuando el tenía tan solo 7 años, nació su hermano mediano, Jayce. Desde entonces,
Bryce ya tuvo que empezar a cuidar de él ya que su madre trabajaba a jornada completa en el
bar más horas extra para poder sacar adelante la familia y su padre se pasaba el día o
drogándose o haciendo actos delictivos de los que Bryce no quería saber nada.

Durante los años, Bryce fue madurando poco a poco, intentó ayudar a su hermano a ir
por el buen camino y nunca fue partícipe del mundo de las drogas ni la delincuencia. A pesar
de esto, siempre había notado en su hermano cierta independencia y pocas veces hacía caso
de lo que Bryce le decía haciendo siempre lo que le daba la gana.

Un día, estando los dos solos en casa, Jayce le pidió ir a jugar a las canchas ya que le
encantaba el ambiente y disfrutaba mucho jugando con los demás niños, sin embargo, Bryce
se asomó por la ventana y vio jugando a los hijos de la pandilla de los Bounty Hunter Bloods y
se negó rotundamente a ir. Pero, como era de esperar, cuando Bryce perdió a su hermano
pequeño de vista, este salió corriendo a jugar con lo que él pensaba que eran amigos suyos, ya
que solo tenía 5 años. Al darse cuenta de esto, Bryce salió corriendo hacia las canchas y se
encontró a tres chicos rodeando a su hermano pequeño y en vez de ayudarle, dejó que le
pegaran un par de golpes a Jayce para que así se diera cuenta de que debía hacerle más caso
cuando le aconsejaba las cosas.

Este tiempo en el que estuvo cuidando a su hermano, también se dedicó, por decirlo
de alguna forma, a los estudios. Iba a clase junto con Jane y Brook. Jane siempre había
destacado en casi todas las materias ya que era un chico bastante inteligente y Brook
conseguía poco a poco aprobar y conseguir esas notas que necesitaba. Sin embargo, Bryce,
solo sabía lo poco de cálculo que su padre le enseñó para que “no le timaran en la calle” y
siempre suspendía alguna que otra asignatura.

Con el tiempo, la cosa fue a peor ya que se pasaba el día distraído por estar pendiente
de su hermano y por aquel entonces, cuando tenía 12 años, su padre comenzó a maltratar a su
madre y los gritos por la noche no le dejaban descansar. Lo único que sentía era impotencia
por no hacer nada y remordimientos al escuchar los gritos de su padre insultando y a su madre
llorar. No solo con esto, meses más tarde, la madre dio la noticia de un nuevo embarazo, su
hermano pequeño Marlon estaba a menos de siete meses de nacer.

Durante estos meses, las circunstancias en casa de Bryce no mejoraron, papá seguía
desapareciendo y volviendo drogado a casa para discutir con mamá, las notas de Bryce no
mejoraban y Jayce empezó a escuchar las peleas entre sus padres lo que hacía todo mucho
más difícil para el chico también. Y finalmente, pasados estos siete meses, nació Marlon.

El día del parto no fue nada fácil, mamá tuvo que ir a uno de los peores de la ciudad
por la economía tan mala que había en casa, papá no aparecía y ella estaba sola en el hospital
con los doctores. Una vez terminado, los enfermeros se llevaron al bebé “para unas pruebas” y
los minutos pasaban y pasaban y los enfermeros nunca volvían. Hasta que, al cabo de una
hora, uno de ellos volvió con un ojo morado y entre sollozos le dio la terrible noticia a mi
madre, un hombre había entrado al hospital y se había llevado a Marlon.

Bestie se pasó días llorando en casa y Axel seguía igual, y por esto mismo, tras una
larga discusión decidieron quedarse un hijo cada uno y la madre de Bryce se fue junto con
Jayce a Nueva York, dejándolo a él solo con su padre.

Con 16 años, Bryce sigue teniendo malas notas y ahora sin su hermano, se sentía sin
ningún tipo de apoyo, solo tenía a Jane y a Brook. Jane iba siempre un poco más apartado de
ellos ya que si dedicaba más tiempo a estudiar, pero Brook al saber la situación de Bryce le
invitaba todos los días a su casa o hacer planes para que pudiera evitar pensar en los
problemas que tenía en ese momento.

Ese mismo año, al terminar el curso, Bryce se vio sobrepasado con los estudios y no
fue capaz de aprobarlo teniendo así que repetir este último. Esto no sirvió para nada ya que las
calificaciones no mejoraban, solo era capaz de aprobar matemáticas y educación física. Sin
embargo, consiguió conocer mucha gente dentro de este nuevo grupo de clase, a pesar de
tener un año menos que él.

En cambio, al ser tan exquisito a la hora de hacer gente nueva, solo llego a hacerse
amigo de dos personas, una chica llamada Kya Scott y un chico llamado Allen Hudson.
Comenzaron a quedar y Kya también vivía en Detroit, por lo que se le hacía mucho más fácil el
poder verla. Además, ella intentó ayudarle con los estudios durante todo el curso y que se
mantuviera por el buen camino. Todo esto, hizo que Bryce comenzara a fijarse en ella y poco a
poco le fuera gustando.
A pesar de esto y de haber intentado sacar el curso, Bryce volvió a suspender por lo
que decidió dejar los estudios definitivamente, lo que le llevó a una situación de estrés enorme
al chico con tan solo 17 años. Necesitaban dinero en casa y con su padre en paro y el sin
estudios no sabía cómo iba a hacerlo. En ese momento, decidió entrar a trabajar en el mismo
bar que lo hacía su madre llegando a estar hasta 12 horas trabajando al día para llevar el
dinero que tanto necesitaban. Apenas descansaba, se pasaba el día frustrado por el trabajo y
solo era capaz de relajarse estando con sus amigos y quedando con Kya.

Pero, un año más tarde, al salir del trabajo, estaba bajando la cuesta del barrio y
encontró a Kya y a Jane juntos hablando, lo que le pareció normal ya que los había presentado
al igual que le presentó a Brook y Allen. Lo que el chico no sabía es que pocos meses después
Kya y Jane empezarían una relación, haciendo que Bryce se frustrara aún más y poco a poco
dejará de hablar con Jane.

Por culpa del estrés, la frustración y la mezcla de todas las malas sensaciones que
estaba teniendo Bryce, a los veinte años, comenzó a fumar para tranquilizarse, los descansos
de diez minutos en el trabajo se habían convertido en los descansos para el cigarro y las tardes
de baloncesto en las canchas en tardes de porros en la rotonda. Además de esto, los chicos del
barrio le enseñaron una forma muy rápida de ganar dinero, hacer de camello, ellos le daban la
droga y el solo tenía que venderla. Lo cual no le gustaba, pero necesitaba el dinero y aceptó.
Poco a poco, lo que hacía por obligación se convirtió en gusto y acabó vendiendo todos los días
porque el dinero rápido le ganó la apuesta.

Poco tiempo después de que empezara con los trapicheos, su antiguo amigo Jane es
asesinado cerca del barrio con un tiro de pistola, muriendo pocos minutos después en el
hospital desangrado. Sin embargo, esto no fue suficiente para que Bryce se diera cuenta del
peligro que tenía ese mundo y no fue hasta que su padre fue llevado a la prisión federal por
tráfico de drogas y conducción bajo el efecto de las mismas cuando el chico se dio cuenta de lo
que esto realmente conllevaba. Fue entonces, cuando decidió coger un nuevo rumbo y
marcharse a la ciudad de Los Santos en busca de una nueva vida haciendo así borrón y cuenta
nueva de todos los problemas que le había traído Detroit.

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