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Destetar sin Lágrimas

Pilar Martínez Álvarez


Copyright © 2012 | Todos los derechos reservados

Pilar Martínez Álvarez


Destetar sin Lágrimas / maternidadcontinuum.com

1ª edición
ISBN: 84-616-2861-6
A mis hijas Pilar y Alejandra, las verdaderas
maestras de mi vida que me enseñan lo
importante día tras día
Pilar Martínez
Indice de Contenido

1. Introducción 12

2. Recomendaciones oficiales 15

Resumen 17

3. M otivos para el destete 18

La incorporación al trabajo tras la baja maternal. 19

Un nuevo embarazo 20

La introducción de la alimentación complementaria 21

La presión del entorno 21

No sentirse apoyada por el papá 22

El cansancio, la necesidad de recuperar su propio cuerpo 23

La agitación del amamantamiento 23

Resumen 24
4. Destete Natural 25

Resumen 28

5. Generalidades a tener en cuenta 29

La decisión sólo pertenece a la mamá o al bebé 29

El destete debe ser gradual 30

No ofrecer, no negar 30

El pecho no es sólo alimento 31

Un cambio cada vez 31

Sigamos nuestra intuición 32

Tristeza de la mamá 33

Resumen 34

6. Destete Parcial 35

Destete parcial en bebés menores de un año 35

Destete parcial en bebés mayores de un año 40

Resumen 43

6. Destete Nocturno 44
No sólo se despiertan por hambre 44

Es un proceso lento 45

A veces no dejan de despertarse aunque estén destetados 45

Todo empeora antes de mejorar 46

Los bebés que aprenden cosas nuevas duermen peor 46

¿Cómo hacer el Plan Padre? 47

¿A partir de qué edad se puede aplicar el Plan Padre? 49

¿Y si el papá no está disponible? 50

Resumen 52

8. Destete total 53

Ideas para hacerlo más fácil 54

Cuando ya no es un bebé 55

Los tres años 57

Resumen 60

9. Bibliografía 62

Acerca de la Autora 64
1. Introducción
Una veces, son los propios niños los que deciden
destetarse solos y nos demuestran lo maduros e
independientes que son.

Otras veces, los amigos de la mamá, su familia, su médico o


la vecina del quinto son los que insisten constantemente
para que destete a su hijo. Esta presión puede ser muy
incómoda para la mamá si no desea dejar de amamantar a su
hijo, pero puede ser también el pistoletazo de salida para
tomar la decisión, si es que estaba rondando por su cabeza
desde hacía tiempo.

Algunas otras veces es la mamá la que quiere dar el primer


paso para destetar, por los motivos que sean (ya los
veremos más adelante), pero la cuestión importante es que
el deseo de destetar parte de ella genuinamente.

Todas las mamás (tanto las que no quieren destetar pero


reciben presiones como las que si quieren destetar) merecen
recibir la mejor información para facilitar este proceso de
destete.

Parece que las Asesoras de Lactancia sólo tenemos que


ayudar a instaurar la lactancia y/o resolver los problemas
que puedan surgir para que la lactancia continúe.

Hay un cierto tabú al hablar del destete y parece que si no


hablamos de él, no existe...pero ¡nada más lejos de la
realidad!

La preocupación por el destete es una de las más


angustiantes para las madres y yo creo que se debe
precisamente a la falta de referentes y al vacío informativo
que existe con este tema.

Algunas mamás sienten vergüenza al consultar sobre el


destete de sus hijos, otras se sienten culpables y esto no
debería ser así.

La misión de las Asesoras es proporcionar la información


necesaria y suficiente relacionada con la lactancia materna y
el destete, en mi opinión, forma parte de la lactancia.

Un destete mal enfocado puede dejar a una mamá dolorida


con una mastitis galopante y a su hijo dañado
emocionalmente, por lo que es mejor estar informada antes
de empezar el proceso.

Además la lactancia materna debe ser algo precioso, íntimo


y un acto de amor desinteresado. Si alguna de las dos partes
afectadas (mamá o bebé) prefiere no continuar, lo mejor es
apoyar esta decisión antes que alargar una lactancia que ya
no es satisfactoria.

Es por esto que me he decidido a escribir este libro. Quiero


ayudar a las madres presionadas para decidir si deben
destetar o no y también a las mamás que ya han tomado su
decisión (como adultas que son) brindándoles toda la
información de la que dispongo, mi experiencia personal y
mi apoyo más sincero.
2. Recomendaciones oficiales
La Organización M undial de la Salud recomienda dar el pecho en
exclusiva durante los seis primeros meses del bebé y a partir de
entonces, seguir dando el pecho al menos hasta los dos años
combinándolo con otros alimentos (alimentación complementaria).
Una vez llegados a los dos años, recomienda continuar con la
lactancia hasta que la mamá y el bebé lo deseen.

La Asociación Española de Pediatría tiene exactamente las mismas


recomendaciones y según se indica en la página web de esta
asociación, la Asociación Americana de Pediatría recomienda cosas
similares.

Según indica en las recomendaciones de la Asociación Española de


Pediatría

“Madre e hijo/a deben decidir hasta cuando mantener la


lactancia. Dar el pecho más allá de los dos años de edad del
lactante, aunque poco frecuente, sigue siendo beneficioso para
ambos”
Aunque existe mucho desconocimiento sobre estas
recomendaciones, lo cierto es que la lactancia siempre será
beneficiosa para ambos (bebé y mamá) siempre que los dos se
sientan a gusto con ella.

Incluso algunos miembros de la comunidad médica, desconocen


estas recomendaciones, por lo que es importante estar bien
informado para poder tomar nuestras propias decisiones.
Resumen

Recomendaciones Oficiales
Las recomendaciones oficiales dicen que la lactancia
será exclusiva durante los seis primeros meses, combinada
con otros alimentos hasta los dos primeros años y hasta
que el bebé o la mamá lo decidan a partir de entonces.
3. Motivos para el destete
El deseo de destetar puede tener muchos motivos y puede
provenir de del niño o de la mamá.

Cuando es el niño quien decide destetarse, entonces


hablamos de destete natural y lo veremos con más
profundidad en el siguiente capítulo.

En el caso de que sea la madre la que quiere destetar a su


hijo, los motivos también suelen ser muy diversos y suelen
depender muchas veces de la edad del bebé.

Lo que si es importante es que la mamá tenga claro el


motivo por el que quiere destetar a su hijo, que sea un
motivo interno, que tenga que ver con sus sentimientos y
que pueda tomar la decisión libre de presiones, ni en un
sentido ni en otro.

A veces el entorno presiona mucho a las mamás lactantes


para que desteten, sobretodo si siguen amamantando a
niños que ya caminan y hablan.

Esta presión se debe a un profundo desconocimiento por el


tema de la lactancia en nuestra sociedad. Desgraciadamente,
los biberones estaban de moda cuando yo nací y en mi
generación nos criaron fundamentalmente con leche de
fórmula porque en aquel entonces, el gusto por lo nuevo,
por lo “moderno” llevó a muchas personas a pensar que
esta leche era mejor que la leche materna.

Esto significa, que esa señora que por la calle te dice que tu
hijo es muy mayor para mamar, probablemente nunca ha
amamantando a ningún niño y tampoco se ha leído las
recomendaciones la OM S, por lo que su opinión no debería
ser tenida en cuenta.

Peor es cuando la presión por destetar viene de un


profesional de la medicina, pero lo cierto es que ocurre y
una mamá que da el pecho debe estar preparada para este
tipo de presiones.

Del mismo modo, una madre que quiere destetar a su hijo


después de haberse informado y de tomar su propia
decisión como adulta que es, debe ser respetada y apoyada.

¿Qué motivos aducen las mamás que quieren destetar?


La incorporación al trabajo tras la
baja maternal.
En España, la baja por maternidad tiene una duración de 16
semanas (un poco menos de 4 meses) por lo que muchas
mamás que no pueden alargar este periodo deben volver al
trabajo cuando su bebé aún debería ser amamantado en
exclusiva.

Suele tratarse de un destete parcial durante las horas en las


que el bebé y la mamá están separados.
Un nuevo embarazo
Hay una creencia errónea que dice que las mamás
embarazadas no deberían amamantar para evitar riesgos de
abortos o de otras complicaciones en el embarazo. Lo
preocupante es que esta forma de pensar está bastante
extendida, incluso entre la comunidad médica.

En realidad esta afirmación no tiene ninguna base científica,


de hecho hay estudios que demuestran que no hay
diferencia en el peso al nacer de bebés cuyas madres dieron
el pecho durante su embarazo, comparados con bebés a los
que sus madres no dieron el pecho en el embarazo
(M erchant 1990).

Asimismo, tampoco existe riesgo de aborto espontáneo


debido a las contracciones uterinas que se pueden producir
mientras el niño mama, ya que se comprobó que la duración
media de los embarazos era la misma en mujeres que daban
el pecho y en mujeres que no amamantaban en su
embarazo.

Sin embargo, muchos niños se destetan solos si su mamá se


queda embarazada porque la leche cambia de sabor y se
vuelve más salada y disminuye la producción de leche
debido a las hormonas del embarazo.
La introducción de la
alimentación complementaria
M uchas personas creen que cuando los bebés empiezan
con la alimentación complementaria, ya no es necesario el
pecho y esto no es cierto porque durante el primer año de
vida del bebé, la leche debe ser su alimento principal. No
olvidemos que la alimentación complementaria se llama
complementaria porque complementa a la leche.

La leche materna va cambiando su composición en función


de la edad del bebé, por lo que no es igual la leche que
pueda tomar un bebé de 4 meses que uno de 10. Siempre se
adapta a las necesidades del niño por lo que siempre será
nutritiva para él y le ayudará a conseguir un óptimo
desarrollo.

Si le quitamos el pecho por este motivo, tendremos que


darle otra leche, que nunca podrá ser tan óptima como la
nuestra.
La presión del entorno
En nuestra sociedad no estamos muy acostumbrados a ver
a las mamás dando el pecho a sus hijos y mucho menos si
ya son tan mayorcitos como para tomar teta de pie.

Es mucho más habitual ver a un bebé tomando un biberón


en la calle o en un parque que tomando pecho.

M uchas personas creen que los niños que ya caminan no


deberían ser amamantados e incluso les humillan diciendo
que tomar teta es de bebés.

De hecho, hay muchos niños de 3 ó 4 años que toman


pecho “en secreto” y no se lo cuentan a nadie. Yo misma
hace ya tiempo que prefiero dar dar de mamar a mi hija
pequeña (que en el momento de escribir este libro tiene 2
años y medio) en casa tranquila sin tener que escuchar
comentarios desagradables o sentirme observada.

Algunas mamás no soportan esta presión o no quieren


soportarla y deciden destetar a sus hijos.
No sentirse apoyada por el papá
Cuando el papá apoya a la mamá en su lactancia todo es
muy sencillo porque actúa como parapeto de muchas
críticas y opiniones ajenas.

Pero cuando el papá escucha a las personas que critican la


lactancia y les da crédito o bien se siente desplazado por el
bebé, continuar con esa lactancia es muy, muy complicado,
porque la mamá tendrá “el enemigo en casa” como se dice
coloquialmente y probablemente se cansará de luchar.
El cansancio, la necesidad de
recuperar su propio cuerpo
A veces la mamá necesita sentir que su cuerpo es suyo y
está cansada de amamantar a su hijo.

A veces necesita desvincularse un poco para terminar su


puerperio o necesita dejar el pecho para poder empezar a
tener otro tipo de relación con su hijo. Igual de cercana y
cariñosa, pero diferente.
La agitación del amamantamiento
Algunas mamás que amamantan en tándem (a dos hijos de
distintas edades) sienten lo que se llama la agitación del
amamantamiento que les hace sentirse incómodas cuando
dan el pecho a su hijo mayor.

También hay mamás que no dan el pecho en tándem que


han descrito sufrir esta agitación.

Esta incomodidad es una sensación intensa, muy visceral y


muy primaria que hace que la mamá rechace amamantar a
su hijo mayor.

Se cree que es algo relacionado con nuestro instinto


mamífero y que no se puede evitar.
Resumen

Motivos para el destete


Sólo la mamá y el bebé pueden decidir cuándo destetar
ya que son los únicos implicados.
Si la mamá desea destetar debe contar con la mejor
información para que el proceso sea lo más llevadero
posible
4. Destete Natural
Cuando el niño es el que decide no tomar pecho es cuando
hablamos de destete natural. Es la forma de destete más
respetuosa con el niño, puesto que le deja decidir hasta
cuándo quiere o necesita ser amamantado.

Todos los niños se destetan algún día, de eso no debemos


tener dudas, pero cada uno tiene unas necesidades únicas y
eso significa que los tiempos pueden ser muy variables.

La Edad Natural del destete, según la antropóloga Kathy


Dettwyler, va desde los dos años y medio hasta los 7 años.
Esta investigadora, ha estudiado el tema durante años en
varios experimentos científicos y según su experiencia este
es el rango más natural para el destete humano.

Este rango es tan amplio porque hay varios índices que se


pueden tener en cuenta para calcular la edad del destete, si
nos fijamos en otras especies de mamíferos.

Comenta Kathy Dettwyler que la mayoría de los primates


destetan a sus hijos cuando empiezan el proceso de
dentición definitiva y les salen los primeros premolares
permanentes. En el caso de la especie humana, los molares
permanentes salen en torno a los 5 años y medio y los 6 y
medio.

Sin embargo, la gestación de nueve meses (que es la


humana) predice una lactancia de cuatro años y medio de
duración y por otra parte, la madurez reproductiva entre
los 12 y los 20 años, predice una lactancia de entre 3 y 6
años de duración.

En cualquier caso, hagamos lo que hagamos, nuestros hijos


se destetarán algún día.

Comenta el pediatra Carlos González, en su libro “Un


regalo para toda la vida” que aunque una madre le dijese que
quería ganar el Premio Guiness e intentara dar el pecho
durante quince años, no lo conseguiría porque su hijo se
destetaría mucho antes.

El destete natural es el ideal para el niño y para la madre (si


así lo desea) porque:

la necesidad de succión del niño va disminuyendo poco a


poco por lo que cada vez tomará menos pecho hasta que
termine dejándolo

la producción de leche de la madre irá disminuyendo


paulatinamente conforme el niño mame menos (evitando
mastitis y otros problemas)

es la forma más respetuosa con las necesidades del niño


porque es la que dicta la propia naturaleza

no es necesaria la utilización de chupetes para calmar la


necesidad de succión del bebé
el nivel hormonal que se reajusta al dejar el pecho, se
hace tan gradualmente que la madre casi ni lo nota

la tristeza de la madre que se produce como consecuencia


del reajuste del nivel hormonal y por la aceptación de que el
niño se hace mayor, es también menor y más llevadera
Resumen

Destete Natural
Si el bebé decide destetar es cuando hablamos de
destete natural que suele ocurrir entre los dos años y
medio y los 7.
Todos los bebés se destetan algún día.
Si dejamos al niño que decida su ritmo de lactancia
poco a poco disminuirá las tomas hasta destetarse del
todo.
5. Generalidades a tener en
cuenta
Cuando una mamá decide destetar a su hijo por el motivo
que sea hay algunas generalidades que seguramente van a
ocurrir y que se deben tener en cuenta:
La decisión sólo pertenece a la
mamá o al bebé
La decisión de destete siempre debe partir de la mamá o del
bebé, de nadie más. Ya hemos visto que hay mucha presión
en el entorno para “obligar” a las mamás a destetar antes de
tiempo o bien al contrario, personas que consideran que las
mamás que quieren destetar no deberían hacerlo y les
presionan para continuar por el bien del niño.

Yo soy partidaria de dar voz y opinión a los dos que están


implicados en la lactancia y a nadie más.

La mamá que quiere destetar debe pensarlo bien y darse


cuenta si el deseo de destetar parte de su interior o si ocurre
como consecuencia de las presiones externas y debe tomar
sus propias decisiones.
El destete debe ser gradual
Tanto si queremos destetar parcialmente como si queremos
destetar completamente, tenemos que intentar hacerlo de
una forma paulatina para no provocarnos problemas con la
producción de leche ni traumatizar a nuestros hijos por el
destete brusco.

Cuanto menos prisa tengamos en el proceso de destete más


sencillo será conseguirlo.
No ofrecer, no negar
Si sabemos que tenemos tiempo para hacer un destete
progresivo, la mejor manera es la de “no ofrecer no negar”.

Es decir, no ofrecemos el pecho al niño pero tampoco se lo


negamos si lo pide. Esto es importante porque si negamos
el pecho, seguramente lograremos el efecto contrario y el
bebé pedirá más y más el pecho al habérselo negado.

También hay que ser consecuentes, porque si decidimos no


ofrecerlo, debemos cumplirlo. Es decir, el pecho nos ayuda
muchas veces a calmar al niño si se cae o si llora o nos sirve
para dormirlo...pero si hemos decidido destetarlo no se lo
ofreceremos.

Esta es la forma más larga para destetar pero es la más


sencilla para el niño y para la madre (si no tiene prisa)
porque es la más gradual.
El pecho no es sólo alimento
Cuando el niño toma pecho no sólo está tomando la leche
materna, está disfrutando del calorcito de mamá, de su amor
y su cariño.

Si estamos en un proceso de destete tenemos que saber que


tendremos que ofrecer mimos y cariños extra de una forma
diferente (ya que el pecho se lo estamos quitando).

Es normal que durante el destete los niños requieran más


mimos y nosotras debemos dárselos para que no sientan
que han perdido nuestro amor.

Si estamos destetando ofreceremos más besos, más caricias,


más masajes, más mimos, más juegos juntos, más
canciones, más tiempo compartido...y así nuestro hijo no
sentirá que está perdiendo nuestro cariño, que no le falte la
parte afectiva de la lactancia.
Un cambio cada vez
Hay que intentar, en la medida de lo posible, que el proceso
de destete no coincida con otros cambios importantes en
nuestra vida y en la vida de nuestro hijo.

El destete ya es de por si un cambio suficientemente grande


como para que nos enfrentemos a él en un momento estable
para que el niño se sienta seguro.

A veces es inevitable que coincidan varios cambios al


mismo tiempo, pero debemos saber que eso puede
dificultar un poco el proceso.
Sigamos nuestra intuición
Nosotras somos quienes conocemos mejor a nuestros hijos,
nadie puede saber mejor que nosotras mismas si algo
funciona bien o mal.

Si vemos cambios muy importantes en la actitud de nuestro


hijo, que se vuelve agresivo, que se vuelve mucho más
demandante, etc. es probable que sea demasiado pronto
para él y debamos retrasar el destete.

Nosotras podemos establecer nuestro propio proceso de


destete conociendo las características propias de nuestro
hijo porque ya sabemos que muchas veces, lo que funciona
con unos no funciona con otros.

A veces tenemos que probar diferentes técnicas para


encontrar la que mejor nos funciona porque el éxito del
proceso de destete depende de muchos factores distintos...

Por eso siempre recomiendo seguir nuestro instinto porque


seguro que nuestra intuición no se equivoca.
Tristeza de la mamá
Cuando la mamá desteta se producen unos cambios
hormonales muy importantes en su cuerpo que pueden
provocar un sentimiento de tristeza.

Además, aunque la decisión haya partido de la mamá, a


veces puede tener sentimientos de ansiedad, sentimientos
de culpabilidad, alegría por el destete y sentimientos de
culpabilidad por sentir alegría...

También puede ser un momento delicado para la mamá y el


apoyo del papá o de su entorno puede ser crucial para no
sentirse mal.

No hay que banalizar sus sentimientos ni hacerlas sentir


culpables de nada, la valoración de sus emociones y el
apoyo incondicional será la mejor medicina para esta
tristeza temporal.
Resumen

Generalidades a Tener en Cuenta


L a decisión de destetar sólo pertenece a la mamá y al
bebé
El destete debe ser gradual para evitar problemas en el
pecho
No ofrecer no negar: es la forma más larga pero la más
sencilla
El pecho no es sólo alimento: si destetamos a nuestro
hijo debemos ofrecerle más mimos, abrazos, caricias...
Un cambio cada vez: hay que intentar que el destete no
coincida con otros cambios importantes en la vida del
niño
Sigamos nuestra intuición: la mamá es quien conoce
mejor a su hijo y es la que mejor va a saber si algo no
funciona bien
Tristeza de la mamá: la mamá también puede necesitar
más mimos y apoyo por sentirse triste con el destete
6. Destete Parcial
Se denomina destete parcial cuando se eliminan algunas de
las tomas de pecho, sea por el día o por la noche, pero no
se elimina el pecho completamente.

El destete nocturno lo veremos en profundidad en el


siguiente capítulo, así que de momento vamos a hablar del
destete parcial diurno.

M uchas mamas prefieren destetar parcialmente para no


hacerlo del todo, porque se sienten mas cómodas así y
además siempre es mas fácil destetar parcialmente que
completamente.

Algunas mamás lo que quieren es espaciar las tomas para


evitar que el niño esté todo el día tomando pecho y también
se animan a probar un destete parcial.
Destete parcial en bebés menores
de un año
Cuanto más pequeño sea el bebé, más importante es
destetar parcialmente de forma progresiva porque si se hace
de forma brusca la mamá podría llegar a sufrir una mastitis
y es muy dolorosa.

Lo que se puede intentar hacer es eliminar una de las tomas,


alternando esta toma con otra alimentación si el bebé es
mayor de seis meses y esperar unos tres o cuatro días antes
de eliminar otra toma para que la producción de leche se
regule.

Una vez han pasado estos días, se puede eliminar otra toma
y así sucesivamente hasta que se consigan eliminar las que
se necesiten por ausencia de la madre.

Las tomas que se vayan eliminando deben ser alternas para


que se vaya vaciando el pecho y no pase demasiadas horas
lleno.

Os voy a poner un ejemplo:


Imaginemos que tenemos un bebé de 5 meses que toma
pecho cada tres horas y la mamá se va a incorporar al
trabajo de 9 a 17 horas sin posibilidad de extraerse leche en
el trabajo.

El horario de tomas diurnas del bebé sería el siguiente:

9 h 12 h 15 h 18 h 21 h

Si la madre pudiera extraerse leche del trabajo no sería


necesario el destete parcial porque podría mantener la
producción con en las horas en las que está ausente por la
extracción de leche, pero en nuestro caso la mamá no puede
extraer su leche por lo que necesita destetar parcialmente.

Se podría empezar eliminando la toma de las 9 horas, se


esperan tres o cuatro días y se elimina la de las 15 horas,
manteniendo la toma de las 12 horas para permitir a la
mamá se vacíe los pechos con la toma.

Cuando la producción de leche se haya regulado, se puede


eliminar la de las 12 horas.

El cuadro de las tomas diurnas iría quedando así:

Primer día de destete parcial (marcado en azul las tomas


eliminadas):

9 h 12 h 15 h 18 h 21 h

Cuatro días después:

9 h 12 h 15 h 18 h 21 h

Cuatro días después:

9 h 12 h 15 h 18 h 21 h

Para el destete parcial en bebés pequeñitos hay que tener en


cuenta varios factores: el horario de la mamá, el horario de
tomas del bebé (porque hay bebés que piden cada cuatro
horas como un reloj y otros que son irregulares), las
características particulares del bebé y de la familia, si hay
otros hermanos por ejemplo....

Cada mamá y cada familia conoce a su bebé y tiene su


p rop ia realidad, pero la recomendación general es esa:
intentar que las tomas no se quiten todas de golpe, que sean
alternas e ir haciéndolo cada tres o cuatro días para que se
ajuste la producción de leche.
Cuando el bebé es mayor de seis meses, las tomas que
queramos eliminar se pueden sustituir por purés o incluso
se puede hablar con el pediatra para adelantar un poco la
introducción de la alimentación complementaria si el bebé
está sano y no hay ninguna contraindicación (para evitar
tener que dar leche de fórmula).

Lo ideal sería que la mamá pudiera extraer su leche en el


trabajo y que el bebé pudiera tomarla en su ausencia. Esta
leche se puede dar con biberón, cucharilla o como la madre
prefiera.

Si se decide dar la leche en biberón, cuando estemos


eliminando las tomas, siempre será mejor que no sea la
madre la que le de el biberón al niño porque es muy
probable que lo rechace ya que el bebé huele el pecho de su
madre y no entiende por qué no se lo ofrece.

Es mucho más fácil eliminar esas tomas si es otra persona la


que le da el biberón al bebé.

Otra cosa importante a tener en cuenta en el destete parcial


de bebés pequeños, es que tienen un instinto de succión
muy alto por lo que puede ser útil el ofrecer chupetes para
calmar al bebé.

La succión es muy relajante para los bebés y la necesitan


muchas veces para estar tranquilos o calmarse, así que es
mejor utilizar chupetes en este proceso.
Destete parcial en bebés mayores de
un año
El destete parcial en bebés mayores de un año es bastante
más fácil de conseguir por varios motivos:

Generalmente ellos solitos van espaciando las tomas


progresivamente de forma que las que se suelen mantener
más tiempo son la toma de la noche para quedarse dormido,
las tomas nocturnas para relajarse y volverse a dormir y la
de la siesta. Hay bebés que siguen mamando mucho casi
como si fueran recién nacidos, pero la mayoría suele ir
separando sus tomas.

Porque ya comen otros alimentos y les interesa otro tipo


de comida. Si ponemos al bebé a comer con nosotros
veremos como tendrá interés en comer la misma comida que
nosotros comamos y tendrá ganas de probar otros sabores
y texturas.

Porque tienen mucho interés en descubrir el mundo que


les rodea y aprender.

Porque ya pueden desplazarse solitos gateando o


andando y les gusta explorar por lo que “se olvidan” un
poco de mamar.

Así que si estás pensando en destetar parcialmente y


eliminar alguna toma de tu bebé y tiene más de un año es
probable que no necesites hacer nada porque él mismo irá
pidiendo menos pecho conforme se vaya haciendo mayor.

Si tu bebé es de los que mama mucho y quieres eliminar


alguna toma puedes probar lo siguiente :

S ustituir alguna toma diurna por otros alimentos.


Ahora que el bebé ya es más mayor y come purés, papillas
u otras cosas, podemos sustituir más fácilmente las tomas
que coincidan con sus comidas. Si el bebé come en familia,
se acostumbrará antes a comer purés en lugar de pecho.

Ofrecer agua, porque algunos bebés sólo tienen sed.

Posponer. Se puede convencer al bebé de esperar un rato


para tomar pecho. Por ejemplo “cuando lleguemos a casa”
o “cuando termines la merienda”, etc.

Acortar las tomas. A veces sólo acortando las tomas,


todo mejora. La mamá no se siente tan cansada y el niño
está contento porque sigue teniendo su “teta”. Se puede
hablar con el niño para que lo entienda y explicar que por
ejemplo sólo le dejamos el pecho “un poquito” o que lo
suelte “cuando contemos hasta 10”...
N egociar. Cuanto más mayor sea el bebé más fácil será
negociar con él la sustitución de la toma por otra cosa:
alimentos, agua, abrazo, besos, etc.

Distraer. Si queremos eliminar una toma por la tarde y


sabemos que nuestro hijo se divierte mucho en el parque,
podemos salir de paseo varios días seguidos para que el
niño “se olvide” de pedir pecho porque estará jugando tan
distraído.

Ofrecer chupetes porque aunque sean más mayorcitos,


siguen teniendo mucha necesidad de succión y si no pueden
consolarse con el pecho, pueden hacerlo con un chupete.

No olvidar las recomendaciones generales: seguir nuestra


intuición, tener más paciencia durante este tiempo, ofrecer
más caricias y abrazos...

Si la mamá está tranquila y le explica al bebé lo que va a


pasar, un destete parcial en bebés grandecitos puede ser
algo sencillo.
Resumen

Destete Parcial
Es muy importante hacerlo progresivamente
especialmente en bebés menores de un año
Se pueden sustituir las tomas por otros alimentos de
forma alterna (para ir vaciando el pecho)
Si el bebé es mayor de un año el destete parcial será
más sencillo
Las consignas generales para un destete parcial en
bebés mayorcitos: sustituir por otros alimentos, ofrecer
agua, posponer la toma, acortar la toma, negociar, distraer,
ofrecer chupetes y no olvidar las recomendaciones
generales de destete
6. Destete Nocturno
El destete nocturno es cuando la mamá quiere eliminar las
tomas de la noche que el bebé toma durante sus despertares
nocturnos.

Normalmente cuando hablamos de destete nocturno, no nos


referimos a que el bebé tome pecho después del baño y la
cena para quedarse dormido, estamos hablando de eliminar
el pecho cuando el bebé se despierta por la noche (a veces
muchas veces) y lo pide para volver a dormirse.

Antes de explicar las técnicas que se pueden utilizar para


hacer un destete nocturno me gustaría aclarar algunas cosas
sobre el sueño de los bebés.
No sólo se despiertan por hambre
Los bebés están aprendiendo a regular sus ciclos de sueño y
todavía no duermen igual que los adultos.

Los despertares nocturnos de los bebés son completamente


normales, de hecho todos los seres humanos tenemos
microdespertares durante la noche, pero los adultos
podemos volver a dormirnos casi sin darnos cuenta.

Estos microdespertares son los que nos hacen cambiar de


postura, taparnos o destaparnos, etc.

En el caso de los bebés y niños pequeños, cuando tienen


estos microdespertares, muchas veces no son capaces de
volver a dormirse en seguida. Es algo normal, simplemente
están aprendiendo a regular sus ciclos de sueño y hasta los
5-6 años no tendrán un sueño igual que el de los adultos.
Es un proceso lento
Conforme los niños se van haciendo mayores, sus ciclos de
sueño van madurando de forma progresiva, por lo que el
destete nocturno también debe ser progresivo.

Hay casos en los que el destete nocturno se consigue en


seguida, pero no es lo más habitual. Lo normal es que sea
un proceso lento.

Si queremos destetar por la noche debemos saber que no es


algo que vayamos a conseguir de un día para otro.
A veces no dejan de despertarse
aunque estén destetados
Hay bebés muy sensibles que se despiertan muchas veces
por la noche y lo que en realidad necesitan es la presencia
de mamá y sus mimos. Se despiertan con sus despertares
nocturnos y tienen miedo de sentirse solos y abandonados
por lo que reclaman a mamá o a su persona de apego.

Los bebés de alta demanda, los que son más sensibles o los
que son más inquietos por la noche puede ser que en
realidad pidan el pecho para calmarse, no para comer.

En estos casos, eliminar el pecho por la noche no asegura


que vayan a dormir del tirón porque en realidad no se está
despertando por hambre.
Todo empeora antes de mejorar
Esta es una realidad bastante común en cualquier destete
que queramos iniciar pero es especialmente importante
saberlo en el caso del destete nocturno.

Es posible que las primeras noches sean complicadas, pero


debemos saber que es normal que todo empeore antes de
empezar a mejorar.

En unos días veremos como vamos consiguiendo nuestros


objetivos.

Si vemos que pasan muchos, muchos días y no está


mejorando en absoluto, es posible que debamos dejarlo
para más adelante.
Los bebés que aprenden cosas
nuevas duermen peor
Cuando los bebés aprenden cosas nuevas muy importantes
para su desarrollo suelen dormir peor y despertarse más
veces porque están asumiendo su nueva habilidad: gatear,
andar, empezar la alimentación complementaria, cuando
sale un diente...

Intentar un destete nocturno en este momento es


demasiado complicado porque ellos dormirán peor y
nosotras estaremos más cansadas con lo que no nos
enfrentaremos al proceso de destete con amor y paciencia.
En estos casos es mejor esperar unos días.

NOTA: para saber más cosas sobre el sueño


infantil os invito a ver la videoconferencia que
ofrecimos Rafi López (creadora de la web
Dormir Sin Llorar) y yo misma.
Una vez ya hemos visto algunas cosas importantes que
debemos conocer sobre el sueño de nuestros hijos vamos a
ver cómo propongo destetar por la noche: con el llamado
Plan PADRE
¿Cómo hacer el Plan Padre?
Para poder hacer el Plan Padre, el papá del bebé debe estar
de acuerdo en el destete nocturno y ayudar a la mamá en el
proceso.

Si el bebé duerme en la habitación de los padres se colocará


junto al papá para dormir, no junto a la mamá. De esta
forma, al estar un poco más lejos físicamente de la mamá no
le llega el olor a la leche materna y la pedirá menos.

Incluso hay mamás que se trasladan a dormir a otra


habitación para que el bebé no las huela tanto.

Si el bebé se despierta será el papá el que intentará calmarlo


con lo que sepa que le gusta: un chupete, un paseo, un
masaje, una canción, mecerlo en brazos, etc.

Si el bebé llora y no se calma, no pasa nada. El papá le lleva


al bebé a la mamá y le da el pecho porque no se trata de que
llore, lo que pretendemos es que poco a poco se vaya
acostumbrando a que el papá también puede atenderlo por
la noche y puede calmarle .

Poc o a poco el bebé se irá adaptando a la


nueva situación, aceptará que el papá le ayude
a volverse a dormir y dejará de pedir el pecho
en sus despertares nocturnos.
El Plan Padre es una forma respetuosa y
progresiva de destetar al bebé por la noche, es
lento pero muy efectivo y sobre todo es un
método muy amoroso.
Hay mamás que se quejan de que no avanzan
porque el hecho de no ver resultados en
seguida puede desanimar a cualquiera después
del esfuerzo realizado, sin embargo si nos
fijamos seguro que veremos avances.

Yo propongo anotar en un cuaderno el número


de despertares del bebé y las veces que ha
necesitado el pecho para dormirse o el número
de veces que ha aceptado la ayuda de papá
para dormirse de nuevo.

Si hacemos este registro durante varias noches


veremos que poco a poco hay un patrón en el
que disminuye el llanto del bebé y de esta
forma nos podemos animar viendo que el
método está funcionando aunque vaya
despacio.
Como he comentado anteriormente, si vemos
que pasan muchos, muchos días y no estamos
mejorando nada de nada, es posible que sea
demasiado pronto para el bebé o que sea un
mal momento para él y podemos dar marcha
atrás con el destete nocturno. De hecho,
algunos bebés a los que se intenta destetar
antes de tiempo empiezan a despertarse más y
a ser más dependientes todavía.
¿A partir de qué edad se puede
aplicar el Plan Padre?
Yo no recomiendo realizar el Plan Padre antes
de los 6-8 meses porque ya sabemos que
durante los seis primeros 6 meses la lactancia debe ser
exclusiva y a demanda por lo que no tiene sentido dejar el
pecho por la noche.

Además a los 8 meses muchos bebés tienen un pico en el


que duermen muy mal porque se les juntan muchas cosas al
mismo tiempo: la angustia de la separación, los dientes, el
gateo, la alimentación complementaria...

Sin embargo a partir de esa edad se puede intentar el Plan


Padre para conseguir un destete nocturno.

También debemos saber que cuanto mayor sea el bebé, más


fácil será el destete nocturno.
¿Y si el papá no está disponible?
En algunas familias el papá no vive con la mamá del bebé o
no apoya su decisión de destetar o no puede ocuparse del
bebé durante la noche por el motivo que sea...

En este caso también es posible destetar por la noche,


aunque la mamá lo tendrá un poco más difícil.

Lo que puede hacer es explicarle al bebé que durante la


noche las tetitas tienen que dormir y que cuando se
despierte le ofreceremos otra cosa para calmarle (algo que
sepamos que a nuestro hijo le gusta y le consuela).

Cuando se despierte si se olvida y pide la teta,


intentaremos estar tranquilas y ofrecerle el sustituto de
consuelo que habíamos pactado juntos.

Si llora desconsolado y rechaza el sustituto le ofrecemos el


pecho pero intentando limitar el tiempo: “sólo un poquito
que el pecho tiene que dormir”.

Al igual que en el plan PADRE no se trata de que llore, se


trata de que poco a poco se vaya acostumbrando a volver a
dormirse sin el pecho. Y de la misma forma seguro que
tendremos avances poco a poco.

Para ver si el proceso está funcionando podemos tener un


registro donde anotemos el número de despertares de
nuestro hijo, el número de veces que ha aceptado el
consuelo alternativo y el número de veces que ha
necesitado el pecho.

Lentamente iremos viendo un patrón en el que el proceso


de destete nocturno va avanzando.

Algunas ideas de consuelo alternativo que funcionan para


otras mamás:

Un chupete

Un masaje en la espalda

Cogerle de la manita

Un paseo en brazos

Cantarle una canción

Contarle un cuento muy suave

Un abrazo

Tocarle la cabecita o el pelo


Resumen

Destete Nocturno
Hay que saber que los bebés no sólo se despiertan por
hambre
El destete nocturno es un proceso lento y hay que estar
preparados para tener paciencia
Que un bebé esté destetado por la noche no asegura que
vaya a dormir del tirón
Los bebés que aprenden cosas nuevas duermen peor
por lo que es mejor esperar a que normalicen su
aprendizaje antes de enfrentarnos al destete nocturno
La mejor forma es aplicando el Plan PADRE: el bebé
duerme junto al papá para no oler el pecho de la mamá. Si
se despierta el papá intenta calmarle y si llora mucho, la
mamá le da el pecho
Con el Plan PADRE se ven los resultados lentamente pero es un
método muy efectivo y respetuoso
Si el papá no está disponible tendrá que hacerlo todo la
mamá
8. Destete total
Se entiende como destete total cuando queremos dejar de
dar el pecho en todo momento y para siempre.

La mejor edad para intentar un destete completo y la más


fácil es la que oscila entre los nueve meses y los trece o
catorce meses porque ya disponemos de la alimentación
complementaria para poder ir sustituyendo las tomas de
pecho y porque es una edad en la que la curiosidad innata
del bebé le empuja a interesarse por otras cosas. Ya no
están tan interesados en tomar pecho si tienen un mundo
apasionante por descubrir a su alrededor.

Destetar a esta edad será más fácil para los bebés y como
consecuencia, para nosotros también.

Para conseguir un destete completo debemos ir


sustituyendo las tomas de pecho por alimentos de forma
alterna y seguir las pautas comentadas anteriormente hasta
conseguir sustituir todas las tomas diurnas y por la noche
aplicar el Plan Padre.

Si el papá no puede aplicar el Plan Padre o no está


disponible habrá que ofrecer otras alternativas de consuelo:
un chupete, un masaje, dar agua, un paseo en el carrito,
mecerlo en brazos, cogerle de la mano, etc. Cada mamá sabe
lo que le funciona o le puede funcionar a su bebé porque
cada bebé es distinto.
Hay que tener en cuenta que el bebé o niño pequeño debe
tomar al menos medio litro de leche al día, así que si lo
vamos a destetar debemos asegurarnos de ofrecerle otro
tipo de leche y lácteos.
Ideas para hacerlo más fácil
Igual que en el destete parcial hay algunos trucos que
pueden hacer que este proceso de destete total sea más
sencillo:

S ustitución. Sustituir la toma de pecho por otros


alimentos es la forma más sencilla de eliminar esa toma. Si
comemos todos juntos en familia es muy probable que el
bebé prefiera estar sentado a la mesa con nosotros y
disfrute de su comida sin acordarse tanto del pecho.

Distracción: Si el bebé está entretenido y distraído se


acordará menos de pedir pecho. Se puede salir al parque, de
excursión, a casa de un amigo, se puede ofrecer un juguete
nuevo o hacer alguna actividad que le encante y que
normalmente no hacemos (pintar con los dedos, ir a la feria,
saltar en la cama...)

Ofrecer chupete. La necesidad de succión sigue siendo


alta y podemos ayudar a nuestro hijo ofreciendo una
alternativa al pecho.

Anticiparse a los momentos en los que suele pedir


pecho y cambiar la rutina. Por ejemplo si sabes que a tu
hijo le encanta tomar pecho después del baño, puede
bañarlo el papá hasta que esté destetado.

No olvidar las recomendaciones generales: en este


momento nuestro hijo necesitará más mimos, abrazos,
demostraciones de afecto, más caricias, más tiempo
juntos...
Cuando ya no es un bebé
Cuando nuestro hijo ya es mayorcito y queremos
destetarlo, podemos hacerlo de dos maneras que yo
considero que son las mejores:

No ofrecer no rechazar

Negociar con él

No ofrecer, no rechazar
La manera más respetuosa de destetar a un niño es
utilizando la técnica de “No ofrecer no rechazar”. Es la que
más respeta su ritmo y su evolución pero también es la más
larga.

Conforme el niño va creciendo va pidiendo menos el pecho,


sobretodo si tú no se lo ofreces (en ningún momento, ni
siquiera cuando se ha caído y está llorando). Si te pide
pecho se lo das, pero no lo ofreces desde el principio.

Poco a poco cada vez lo pide menos y al final se acaba


destetando del todo.

Negociación
Nuestro hijo merece nuestro respeto y nuestro amor. La
lactancia es algo muy satisfactorio, pero debería serlo para
las dos partes implicadas: la mamá y el niño.
Si la mamá no se siente bien dando el pecho a su hijo por el
motivo que sea, debería explicárselo a su hijo porque es
seguro que el niño está notando que su mamá no está a
gusto dándole el pecho, siente miedo de perder su amor y
se siente inseguro. De hecho es muy posible, que al notar
que su madre se siente mal al darle el pecho, lo pida más
insistentemente para sentirse querido y conectado con su
mamá (justo lo contrario que queremos conseguir).

El niño lo puede pasar muy mal en estos momentos y lo


más honesto y respetuoso es que sepa la verdad.

No tenemos que tener miedo de hablar con nuestro hijo.


Los niños son muy generosos y suelen entender muy bien
los sentimientos cuando se los explicamos con palabras
sencillas.

Podemos explicarles que ya no estamos cómodas dándoles


el pecho, que estamos cansadas y que queremos dejarlo,
pero siempre dejando claro que les queremos exactamente
igual que antes.

Podemos negociar con él una forma de sustituir la


demostración de afecto que obtiene con el pecho, algo que
le demuestre que le queremos muchísimo para ofrecérselo
cuando veamos que quiere pecho: un beso, un abrazo
fuerte, unas cosquillas, un beso de gnomo, un masaje de
pies, etc.

Es mejor que sea algo cariñoso pero no material o una


golosina. Algo que le demuestre que seguimos queriéndole
y que estamos a su lado para lo que necesite aunque no le
demos el pecho.

Después entre los dos podemos buscar una fecha que nos
venga bien a los dos. Ni muy pronto (apara que se haga a la
idea internamente) ni muy tarde (para que no se olvide del
acuerdo).

Y cuando llegue el día D lo hablamos y lo hacemos.

La negociación suele funcionar muy bien, incluso mamás


que no se lo creen o que piensan que no va a funcionar se
sorprenden de lo maduros y comprensivos que son sus
hijos porque lo comprenden todo y lo cumplen.
Los tres años
Cuando el niño cumple los tres años es un momento muy
especial y requiere una mención especial porque el niño
sufre un cambio evolutivo muy importante:

A los tres años el niño ya puede ser consciente de su


madre aunque no esté presente visualmente, es decir que
puede entender “de verdad” que si su mamá se va, va a
volver después.

Su necesidad de succión disminuye muchísimo por lo


que bastantes niños abandonan espontáneamente el
chupete a esta edad o deciden destetarse.

La etapa oral suele terminar a los tres años por lo que


además de no necesitar tanto la succión, tampoco necesita
tanto la boca para expresar sus emociones.

El desarrollo del lenguaje está muy avanzado y también


su comprensión de las cosas y de las situaciones.

Si una mamá quiere destetar a su hijo y tiene tres años


probablemente será la que más fácil lo tenga (si no ocurren
otros cambios al mismo tiempo) porque la negociación con
él será muy sencilla.

Se le puede explicar que estamos cansadas de seguir dando


el pecho, que nos gustaría expresar nuestro cariño de otra
forma. Podemos explicar los buenos momentos que hemos
disfrutado gracias a la lactancia y todos los beneficios que
nos ha aportado a los dos, pero que ha llegado nuestro
momento de avanzar y dejarla atrás.

Con tres años lo entenderá mucho mejor y el proceso será


más sencillo.

Si una mamá tiene un hijo de más de dos años y sabe que a


los tres años se producen todos estos cambios, quizá
prefiera esperar unos meses para facilitar el proceso.
Resumen

Destete Total
La edad más sencilla para destetar totalmente a un bebé
es entre los 9 y los 14 meses
Por el día las consignas generales son las mismas:
sustitución, distracción, ofrecer chupete, anticipación, no
olvidar las recomendaciones generales
Por la noche se recomienda el plan PADRE
Cuando ya no es un bebé podemos seguir la técnica de
“no ofrecer no negar” o la negociación
Si decidimos destetar a los 3 años lo tendremos sencillo
porque los niños suelen aceptarlo bien por su proceso
evolutivo
9. Bibliografía
Un Regalo para Toda la Vida, Carlos González

Lactancia M aterna, Guía para Profesionales. Comité de


Lactancia M aterna de la Asociación Española de Pediatría

M anual de Lactancia M aterna, de la teoría a la práctica.


Comité de Lactancia M aterna de la Asociación Española
de Pediatría

Alimentación complementaria y período del destete


. Nutrición en la Infancia y la Adolescencia. Ballabriga A,
Carrascosa A

Breastfeeding a Guide for the M edical Profession


. Lawrence R
Acerca de la Autora
Pilar M artínez Álvarez es farmacéutica, asesora de lactancia y
madre de dos hijas.

Es la mamá al frente del blog M aternidad Continuum donde


escribe habitualmente sobre lactancia materna, crianza, sueño
infantil, educación y cualquier tema que esté relacionado con la
maternidad, siempre desde el punto de vista de la crianza
respetuosa.

http://www.maternidadcontinuum.com

En su blog se puede descargar gratuitamente una Guía para el


Almacenamiento y Extracción de Leche M aterna.

Es autora del libro “Los 5 Pasos para Tener Éxito en tu Lactancia


M aterna” que da las claves necesarias para conseguir una lactancia
de éxito.

Lo puedes encontrar aquí:


http://www.lactanciadelbebe.com

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