Está en la página 1de 2

Testimonio de mi experiencia con Remendando el alma

 Mi nombre es – ALPIDIO AGUDELO RESTREPO.


 Soy de Medellín, Colombia, Pastor por espacio de 22 años en la Iglesia Cristiana CASA
DE DIOS PARA LA FAMILIA. Teólogo, egresado del seminario Bíblico de Colombia.

 La inquietud por aprender y mejorar cada día más, y poder ayudar a otros, me llevó a
aceptar la invitación del ministerio CRISTO PARA LA CIUDAD, para asistir al
seminario virtual de “Remendando el Alma”.

 En un principio el solo nombre del ministerio me llamó la atención. Mis primeras


preguntas fueron: ¿Cómo se da uno cuenta que tiene el alma rota? Y ¿Cómo ponerle un
remiendo al alma?

 A medida que me fui adentrando en el curso, lo encontraba más interesante y sobre todo
muy aplicable al tiempo que vivimos.

 Aunque en mi vida no tuve una experiencia fuerte de abuso. Durante el curso de


“Remendando el Alma”, El Espíritu Santo si me llevó a tratar algunas áreas donde fui
maltratado ( uno cree que a uno viejo ya no abusan) y a obtener sanidad y cambio.

 A continuación quiero compartir algunos conceptos que me fueron llegando mientras


realizaba el estudio.

1. Rutina en nuestra consejería

 lastimosamente nosotros los pastores y líderes consejeros, escuchamos una situación de


abuso y pocas veces, sino es ninguna, ahondamos en los efectos producidos por dicho
abuso.
 A la Iglesia nos llegan personas sumidas en la soledad, en la depresión, con el deseo de
no vivir más, expresan su impotencia para remediar el problema y a todo esto se le suma
un claro desgano por involucrarse en tareas de la Iglesia (por falta de confianza en Dios).
 Y nosotros (los pastores, los líderes) de una manera religiosa e irresponsable, mandamos
a la víctima a “perdonar y perdonarse” sin más ayuda que una presión condenatoria.

 Con razón tenemos tan pocas personas realmente comprometidas en la Iglesia. Pues no
les estamos atendiendo como se debe.
 El seminario de “Remendando el Alma” nos impulsa (conmigo lo hizo) a conocer y a
capacitarnos en estos visibles efectos del abuso, a fin de que dejemos de ser tan
superficiales en la consejería, y aportemos ahora si una solución clara bíblica y efectiva a
la persona que llega buscando ser liberada de este problema.

2. Ingenuidad Cristiana

 Muchos pastores pecamos por ingenuos. Nos parece que el abuso solo se presenta en el
mundo externo de la iglesia. Defendemos la Iglesia pensando “aquí dentro ya estamos
curados”( todos somos nacidos de nuevo) – ¡si..como no¡ …Se nos olvidan las tretas y
artimañas del enemigo, nos confiamos y dejamos camuflar este flagelo en la Iglesia.

 Doy Gracias a Dios que en este seminario se habla y se muestra con transparencia casos
de abusos al interior de la Iglesia que nos hacen “abrir los ojos” y “estar alerta”, para
evitar dolor en el futuro.

3. Alerta Espiritual

 “Remendando el alma” produjo un efecto de despertar en mi función ministerial. Ahora,


tendré más cuidado con los obreros que me colaboran y con los nuevos que se postulan
en los ministerios especialmente con los niños.

 El dicho popular: “Guerra avisada no mata soldado”. Es aplicable hoy con


“Remendando el alma”.
 Creo que Dios nos está equipado con esta gran herramienta, no solo para hacer
tratamientos correctivos, sino también tratamientos preventivos al interior de la iglesia, y
así lograr tener Iglesias sanas en un futuro cercano.

 Considero que cada pastor y líder cristiano de todo el mundo, necesita estudiar este
seminario para hacer un trabajo ministerial más eficaz.
 “Remendando el alma” – en poco tiempo ya me ha ayudado con algunas personas de la
iglesia, llevándolos a una sanidad que antes no habíamos encontrado, logrando una
madurez que era un necesidad urgente para vivir el cristianismo y capacitando lideres
para ayudar a otros.
 Estoy dispuesto a hacer lo posible para que cada hermano de la Iglesia aprenda de REA.

También podría gustarte