Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
INTRODUCCION.
Jesús nos habla en esta parábola, de un pastor que tenía 100 ovejas, y que al contarlas
todas, se da cuenta que le falta una, y deja las noventa y nueve en el corral, para ir a
buscar la que se le ha perdido. Él sabe que la oveja está perdida porque esta no podrá
volver por ella misma al redil; se salió del camino y algo debe haberle pasado. En esta
parábola, Jesús nos hace un escenario que es muy conocido en la cultura del lugar, pues
todo mundo conoce lo que es un pastor y sus ovejas. Nosotros, aunque no entendemos
del cuidado o manejo de las ovejas, Él sabe que se está refiriendo también a las
personas. Las ovejas son animales preciados en ese tiempo y ahora, por su lana, por la
leche y por su carne, pero al mismo tiempo son criaturas poco inteligentes y que no se
pueden defender ellas mismas de los peligros; necesitan un pastor.
SERMON:
Jesús nos dice que cuando el pastor cuenta sus ovejas, nota que le falta una, y deja las
noventa y nueve en el redil y va en busca de la que se ha quedado perdida. Cuando la
encuentra, la pone sobre sus hombros y regresa con ella gozoso de haberla encontrado.
Él va y cuenta a sus amigos, y todo mundo se regocija con él. Generalmente cuando una
oveja no aparece en el conteo, es porque se la ha llevado algún lobo, o quizás se metió
en un lugar de donde ella no puede salir, o a lo mejor se golpeó y está herida. El pastor
que ama sus ovejas ira en seguida a buscarla, pues para él, una oveja es algo muy
valioso. Hay sin embargo pastores asalariados que aman solamente el dinero, y seguro
que dirá: ah, es tan solo una oveja, ya aparecerá, si no, mañana iré a buscarla. Y en
términos de iglesia, cuando el pastor ve que una de las ovejas no vino al culto, si él ama
las almas, la llamara y tratara de ver qué pasa con ella, de lo contrario no le importara si
viene o no viene. Las ovejas son los animales más indefensos del mundo, y ni siquiera
son inteligentes; ellas siempre necesitan de un pastor que las saque del redil, que las
lleve a pastar, que les de beber, y que las traiga de regreso al corral. Las ovejas se
asustan con cualquier cosa, son miedosas. Se apartan del camino fácilmente, y no tienen
sentido de orientación, ni visión para estar pendientes del peligro. Muchos de nosotros
somos así, seguimos a cualquiera que se ofrezca liderarnos, somos fácilmente
engañados por filosofías de hombres, caemos en las trampas del diablo fácilmente, no
podemos controlar nuestros deseos, parecemos inteligentes, pero no lo somos,
parecemos sabios, pero no lo somos; pues la verdadera inteligencia es conocer a Dios, y
la verdadera sabiduría, seguir Sus mandamientos. Todos necesitamos de un buen pastor,
y el mejor de todos es Jesús. Él es nuestro modelo, nuestra inspiración más grande; Él es
nuestro guía, nuestra verdad, nuestro camino y nuestra vida. Dale tu corazón a Jesús y
habrás encontrado el tesoro más grande de tu vida.
Mateo 6:33 Busca primero el reino de Dios y su justicia (Jesús), y todo lo demás será
hecho por añadidura
CONCLUSION.
Todos venimos a ser una oveja perdida, cuando andamos en el mundo sin Dios, y
haciendo lo que nos da la gana, pero venimos a ser una oveja rescatada, cuando venimos
a Cristo y entregamos nuestra vida a Él. Entonces habremos pasado de muerte a vida.
(Estabais muertos en vuestros delitos y pecados, pero Él nos dio la vida (Efesios 2:1). Yo
vine, dice el Señor, para daros vida, y vida en abundancia (Juan 10:10). La vida que
Cristo da no es cualquier vida, es una vida en el espíritu, la verdadera vida que un hombre
o mujer debe vivir. Cuando vienes a Cristo, tu manera de pensar cambia, tu manera de
hablar cambia, tu manera de reaccionar cambia, ya no estas como barco a la deriva, sino
que ahora tienes alguien en el timón de tu destino; Él es Jesús. Solo con El llegaremos a
puerto seguro. Muchas personas se preocupan de lo que han de ser en este mundo, más
lo importante es saber que tu nombre este escrito en el Libro de la Vida, en el cielo.
Una de las experiencias más grandes en la vida cristiana es saber que somos amados por
Dios, nuestro Padre eterno. La parábola de hoy nos muestra que somos muy valiosos
para Dios, nadie busca lo que no tiene valor y si el Señor nos busca es que somos muy
valiosos. ¿Qué hizo la oveja para que el pastor la buscara? No era la mejor oveja, ni la
más gorda, ni la más valiosa. Solamente estaba perdida. Jesucristo, el Buen Pastor, nos
busca cuando estamos perdidos. Al mismo tiempo el amor de Dios nos motiva a amar a
otros y aún a aquellos que no conocen a Dios. 1 Juan 4:10-11