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Pagina del titulo


Derechos de autor
Epı́grafe
Prefacio
PARTE I - ANTES
1. El Dodger ingenioso
2. Mi trapo de nicotina
3. Ese lugar apestaba a caucho
4. El Nonce en el Paso Subterrá neo
5. Cabeza rapada Pisotó n lunar
6. La capa de invisibilidad de Steve Jones
7. Má quina de plata
8. En Rod con iamos
9. El tipo del diente
10. La cueva de los muebles
PARTE II - DURANTE
11. Dé jalo rockear
12. El Fantasma del Odeó n
13. 'Caracortada, Caracortada, con cicatrices de oreja a oreja'
14. Kutie Jones y sus Sex Pistols
15. El niñ o miró a Johnny
16. La calle Prı́ncipe de Dinamarca
17. Las cintas de esperma
18. ¿Dó nde está Bill Grundy ahora?
19. Vicious - Me pegaste con una lor
20. No importa las tonterı́as...
PARTE III - DESPUES
21. Los chicos de Brasil
22. Siouxsie Por cierto
23. 'Me oriné en la tumba de Elvis'
24. El hogar es donde está la foto de 8x10 del corazó n
25. Desintoxicació n en Tarzana
26. Iggy, Dylan y el Gran O
27. El hombre lobo del atardecer
28. Terapia de grupo
29. No dormir hasta Hammersmith
30. Los chicos siguen girando
Apé ndice: Cosas que no son Rock 'n' Roll
Agradecimientos
Cré ditos de imagen
Fotos
Derechos de autor
Copyright © 2017 por Steve Jones
Copyright © 2017 por Chrissie Hynde

"Chico solitario"
Letra y mú sica de Paul Thomas Cook y Stephen Philip Jones
© 1979 BMG Ruby Songs (ASCAP) / Three Shadows Music (ASCAP): 100,00 % administrado por
BMG Rights Management (US) LLC.
Reservados todos los derechos. Usado con permiso.

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Primera edició n Da Capo Press 2017


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ISBN: 978-0-306-82481-4 (tapa dura)
ISBN: 978-0-306-82482-1 (libro electró nico)
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Derechos de autor
Epígrafe
Prefacio
PARTE I - ANTES
1. El Dodger ingenioso
2. Mi trapo de nicotina
3. Ese lugar apestaba a caucho
4. El Nonce en el Paso Subterráneo
5. Cabeza rapada Pisotón lunar
6. La capa de invisibilidad de Steve Jones
7. Máquina de plata
8. En Rod confiamos
9. El tipo del diente
10. La cueva de los muebles
PARTE II - DURANTE
11. Déjalo rockear
12. El Fantasma del Odeón
13. 'Caracortada, Caracortada, con cicatrices de oreja
a oreja'
14. Kutie Jones y sus Sex Pistols
15. El niño miró a Johnny
16. La calle Príncipe de Dinamarca
17. Las cintas de esperma
18. ¿Dónde está Bill Grundy ahora?
19. Vicious - Me pegaste con una flor
20. No importa las tonterías...
PARTE III - DESPUÉS
21. Los chicos de Brasil
22. Siouxsie Por cierto
23. 'Me oriné en la tumba de Elvis'
24. El hogar es donde está la foto de 8x10 del
corazón
25. Desintoxicación en Tarzana
26. Iggy, Dylan y el Gran O
27. El hombre lobo del atardecer
28. Terapia de grupo
29. No dormir hasta Hammersmith
30. Los chicos siguen girando

Apéndice: Cosas que no son Rock 'n' Roll


Agradecimientos
Créditos de imagen
Fotos

Estoy completamente solo,
no tengo casa
'Niño solitario', Sex Pistols
PREFACIO
Era un adolescente cuando lo conocı́. No lo noté cargando un saco lleno
de sueñ os, pero lo estaba. Como todos nosotros, querı́a tocar la guitarra
en una banda de rock and roll. Pero ninguna de las bandas encaja.
Nos juntamos con Malcolm y Viv, y con ellos, el rock progresivo y el
algodó n de azú car Top of the Pops del dı́a parecı́an irrelevantes. Cuando
apareció en el escenario una noche con un pequeñ o atuendo nihilista,
los Sex Pistols, solo las calcomanı́as femeninas en su Les Paul
traicionaron la pose.
Aquı́ habı́a un fan de Elvis. un dandi
Las chicas tenı́an debilidad por este tı́mido mató n del oeste de
Londres y é l se aprovechó al má ximo. (El amanecer no era seguro a su
alrededor.) Cuando todo se vino abajo con la banda, sacó un Lemmy y se
fugó a Los Angeles. Tengo un camió n y un perro.
Nadie podrı́a haber predicho que se convertirı́a en el presentador del
mejor programa de radio del estado. Pero claro, nadie podrı́a haber
predicho a Jonesy.
Chrissie Hynde, julio de 2016
PARTE I: ANTES
1. EL DODGER ARTIFICIAL
Una de las principales cosas que recuerdo de mi infancia en el oeste de
Londres en la dé cada de 1960 fue el hierro corrugado, eso y el extrañ o
Ford Anglia que circulaba. Habı́a obras de construcció n y escombros por
todas partes, era como si todo el lugar se estuviera derrumbando a
nuestro alrededor. Y el hierro corrugado era una auté ntica ná usea (es
decir, un maldito dolor en el culo) para escalar. Tenı́a dos metros y
medio de altura y era lo su icientemente a ilado como para cortarte las
manos mientras subı́as a la cima. Era casi como si esos constructores no
quisieran que entrara allı́ y desarrollara mis habilidades de conducció n
al conectar excavadoras para destrozar sus casas de té , los
desconsiderados capullos.
No se veı́an muchas estrellas de cine en las calles de Shepherd's Bush
en esos dı́as, a pesar de que los estudios de televisió n de la BBC estaban
a la vuelta de la esquina. Entonces, cuando Jack Wild, ¡el niñ o que
interpretó al Artful Dodger en Oliver! – pasé por el inal de mi camino, un
dı́a a ines de la dé cada de 1960, eso siempre iba a ser algo que me
llamara la atenció n. Yo mismo ya era un poco há bil para esquivar en ese
momento, tal vez sin robar un bolsillo o dos todavı́a, pero ciertamente
dando un buen hogar a la extrañ a bicicleta robada o al nuevo tren recié n
salido del almacé n de Hamleys. Pero no estaba mirando a Jack como un
modelo a seguir criminal. Todo lo que me interesó fue el hecho de que
era famoso: si hubiera sido Elsie Tanner de Coronation Street caminando
por mi calle, habrı́a estado igual de emocionada.
Algunos otros niñ os y yo nos dimos cuenta de quié n era y
comenzamos a seguirlo. Supongo que esto no era nada demasiado
extrañ o en sı́ mismo, solo la reacció n comú n que cualquier niñ o de trece
añ os podrı́a tener hacia alguien que reconocı́a de una pelı́cula o de la
televisió n: querer estar lo má s cerca posible de é l con la esperanza de
que algú n de la magia podrı́a contagiarse. Pero siempre tuve que llevar
las cosas un paso má s allá . Uno por uno, todos mis compañ eros se
fueron, pero yo seguı́ siguié ndolo, como si fuera Peter Pan o algo ası́. No
estoy seguro de por qué ahora. Supongo que me sentı́ má s atraı́do que
ellos por esa cualidad especial que le dio el estrellato.
Jack Wild era un par de añ os mayor que yo, pero no era mucho má s
grande que yo. No se veı́a nada especial – no estaba usando su sombrero
de copa ni nada. Es solo que cuando eres uno de esos niñ os que tiene esa
sensació n de estar atrapado y tal vez un poco solo, si ves a alguien que
parece tener todo resuelto, piensas que si puedes estar cerca de ellos
todo estará bien y todo el dolor que sientes simplemente desaparecerá .
No sé qué pensaba de que yo lo siguiera. Supongo que lo asustó un
poco, especialmente con todo ese hierro corrugado a lo largo de los
lados del camino por el que nunca hubiera podido escapar. En ese
momento mis compañ eros y yo é ramos parte de la primera ola de
skinheads; escuchando Motown, Ska y Blue Beat, amando la mú sica de
gente como Prince Buster, a quien habı́amos recogido de los niñ os de las
Indias Occidentales que vivı́an a nuestro alrededor. Ası́ que si Jack se
hubiera dado la vuelta para echarme un vistazo, tratando de parecer
casual mientras lo hacı́a, me habrı́a visto jugando a los bolos detrá s de é l
con mis botas Dr Marten de color rojo oscuro con las suelas de la era
espacial a travé s de las cuales se podı́a ver. Pulı́ la mierda de mi primer
par de esos. Probablemente tambié n me habrı́a puesto unos bonitos
pantalones a cuadros de Sta-Prest o Prı́ncipe de Gales , y una de esas
camisas impecables de Ben Sherman que irı́a hasta Richmond a robar en
una tienda llamada Ivy League.
Probablemente se sintió bastante aliviado cuando inalmente
abandoné la persecució n una milla má s adelante. En añ os posteriores,
cruzarı́a muchas lı́neas para acercarme a las personas que pensaba que
podrı́an curarme, pero aú n no habı́a comenzado a beber, por lo que
todavı́a me quedaban algunos lı́mites. Jack Wild se irı́a a Hollywood poco
tiempo despué s, pero no creo que su historia terminara muy felizmente.
Muchas de esas estrellas infantiles parecen tener vidas trá gicas al inal,
¿no es ası́? La fama los jode a una edad temprana, pero cuando está s
ocupado envidiando a alguien, nunca piensas en el hecho de que podrı́a
tener sus propios problemas.
Cuando era niñ o, solı́a tener fantası́as en las que imaginaba tener
padres diferentes. Veı́a gente en pelı́culas o programas de televisió n y
pensaba: '¿Por qué no puedo estar en su familia?' Diana Dors, que era
una especie de Marilyn Monroe inglesa, era una de ellas. Pasarı́a mucho
tiempo pensando en lo mucho mejor que estarı́a si fuera su hijo:
'Dé jame estar con Diana, en lugar de estos padres que tengo'. Lo curioso
es que ni siquiera creo que fuera algo sexual en ese momento,
simplemente no me gustaba mi vida de mierda y estaba buscando algo a
lo que agarrarme para alejarme del lugar en el que estaba.
No es que haya tenido la peor infancia de mi vida. Escuchas historias
horribles de niñ os que pasan por peores abusos que yo, y odiarı́a que
parezca que estoy tratando de ponerme en ese nivel. Lo que sı́ sé es
cuá nto me jodieron las cosas que sucedieron cuando era niñ o, todavı́a
ahora, hasta el dı́a de hoy. Por supuesto, la quı́mica del cerebro de todos
es diferente, por lo que algunas personas pueden lidiar con cosas mucho
peores y salir bien, y otras pueden tenerlo muy fá cil y aú n ası́ sentirse
muy mal. Todo lo que puedo contarte son mis propias experiencias, y
dado lo dudosa que es mi memoria, ni siquiera puedo estar muy seguro
acerca de algunas de ellas.
No tengo ni idea de có mo será mi historia una vez que esté todo
escrito. No tengo ningú n tipo de agenda desde el principio, má s allá de
algunas cosas que quiero aclarar, y tal vez con la esperanza de poder
entender un poco má s có mo encajan las diferentes etapas de mi vida.
Una cosa de la que estoy bastante seguro es que no voy a salir de todo
esto oliendo a rosas.
¿Conoces esa parte de La naranja mecánica , donde el protagonista
tiene los ojos abiertos a la fuerza para que se sienta como una mierda
cada vez que recuerda lo cabró n podrido que era? Eso es má s o menos
có mo se sentirá escribir este libro para mı́. Obviamente, nadie me está
obligando a hacerlo, y tambié n he tenido mi parte de buenos momentos,
pero ahora ya no puedo seguir con mis viejas travesuras, a veces me
hace sentir casi fı́sicamente enfermo pensar en algunos de la mierda
horrible que solı́a hacer.
A pesar de que ha pasado la mitad de mi vida desde que dejé de
beber y tomar drogas, a veces todavı́a me despierto con sudor frı́o,
pensando en todas las cosas que he hecho de las que no estoy orgulloso.
Pero si hiciera una gran canció n y baile sobre responsabilizarme por
cada nuevo crimen contra la humanidad que cometo, este libro se
volverı́a muy aburrido muy rá pidamente. Ası́ que tendré que pedirles
que confı́en desde el inicio en que estoy tratando de ser una persona
menos despreciable en estos dı́as, y luego cualquiera que quiera
juzgarme puede hacerlo a tiempo completo. silbar.
Una cosa que puedo prometerte es que no ponti icaré sobre có mo
todos los demá s necesitan estar sobrios. Me importa un carajo si otras
personas quieren drogarse. He tenido mi oportunidad y ahora es tu
turno: noquearte si eso es lo que quieres hacer. Por supuesto, si alguien
má s puede relacionarse con mis experiencias y por algú n milagro que
les ayude a ser menos idiotas que yo, entonces eso está muy bien. Pero
no quiero ser ese idiota que dice: 'Oh, é l era un rock and roll, pero ahora
le está diciendo a todos los demá s có mo vivir'. A la mierda con ese tipo
sermoneador. Es la ú ltima persona que quiero ser. Solo porque
eventualmente terminé siguiendo a Jack Wild a Hollywood, eso no
signi ica que tambié n compré un boleto de ida a La-La Land.
Pasarı́an algunos añ os má s despué s de encontrarme con el Artful
Dodger hasta que conocı́ a mi propio Fagin, tambié n conocido como
Malcolm McLaren (a quien le encantaba toda esa mierda dickensiana).
Una vez que eso sucedió , fue como si el viejo Jack hubiera pasado la
batuta, y no pasó mucho tiempo antes de que nuestra alegre banda de
forajidos musicales comenzara a robarle los bolsillos a las compañ ı́as
discográ icas como si no hubiera un mañ ana. Pero cuando nos dimos
cuenta de que nuestro Svengali de dedos ligeros habı́a gastado todo el
botı́n en The Great Rock 'n' Roll Swindle , una pelı́cula que explica có mo
todo el asunto del punk fue idea suya y nosotros solo é ramos un grupo
de tontos que no podı́an 't play - resultó que la broma era sobre
nosotros.
Y en cuanto al molesto mocoso con la gran estructura ó sea que
siempre está pidiendo má s... bueno, dejemos a Johnny Rotten fuera de
esto por un tiempo, ¿de acuerdo? Ha tenido su opinió n un par de veces.
Tal vez su icientes veces. Es mi turno. Porque por mucho que los Sex
Pistols no hubieran existido sin John, o Malcolm, o Cookie, o Glen, o
incluso Sid, fue mi educació n de mierda lo que puso las cosas en marcha.
No soy yo presumiendo, es solo un hecho.
2. MI TRAPO DE NICOTINA
Nacı́ en 1955, casi al mismo tiempo que el rock 'n' roll. Obtuve mi
sentido del ritmo de mi madre, Mary Jones, que era una niñ a Teddy, ası́
que estaba en su puto ú tero cuando ella bailaba por el Hammersmith
Palais.
Las teddy girls —y los teddy boys, que es lo que era mi padre—
fueron los primeros de la larga lista de cultos juveniles britá nicos que
alegrarı́an los añ os de la posguerra. Su nombre se acortó del estilo
eduardiano de ropa que preferı́an (como pantalones de tubo y
chaquetas largas y drapeadas) y fueron los que comenzaron a
amotinarse con 'Rock Around the Clock' cuando se estrenó la pelı́cula
Blackboard Jungle . No es de extrañ ar que tenga una conexió n tan fuerte
con todos esos viejos rockeros de los primeros dı́as: Eddie Cochran,
seguro, pero no solo é l.
Hasta la edad de unos seis añ os, mi infancia transcurrió bastante
bien. Bien, entonces mi padre se habı́a ido a la mierda sin quedarse el
tiempo su iciente para saludarme, y en ese momento estaba un poco
prohibido ser lo que té cnicamente todavı́a se conocı́a como 'un
bastardo'. Pero realmente no podı́as culparlo, ya que no creo que é l y mi
madre hayan estado juntos tanto tiempo cuando ella quedó embarazada.
Y el hogar en el que vivı́a se sentı́a como un hogar bastante normal,
incluso amoroso. Podrı́as decir, '¿Có mo sabe un niñ o lo que es normal,
cuando no tiene nada má s con lo que compararlo?' Pero creo que
simplemente lo saben. Ciertamente lo hice.
Mi madre y yo vivı́amos con mi nan Edith y mi abuelo Fred en un
apartamento del tercer piso en Riverside Gardens, Hammersmith. Es esa
gran propiedad de ladrillos de Peabody, cerca del puente. Si se dirigiera
desde Londres hacia el aeropuerto de Heathrow, verı́a el Hammersmith
Odeon, o Apollo, como lo es ahora, a su izquierda mientras conducı́a
hacia el oeste por el paso elevado, luego nuestros apartamentos estarı́an
a la derecha cuando baja. del paso elevado y la carretera principal se
nivela. Lo digo como si hubiera cambiado, pero todavı́a estaban allı́ la
ú ltima vez que miré (aunque es cierto que eso fue en 2008).
No é ramos solo nosotros cuatro. Los otros tres hijos de mi abuela y
mi abuelo tambié n vivı́an allı́. Dormı́ en un catre al pie de la cama que mi
madre compartı́a con su hermana Frances. Mi abuela y mi abuelo tenı́an
su propia habitació n y mis tı́os, Barry y Martin, compartı́an la ú ltima
habitació n. El piso discurrı́a entre dos esquinas de la manzana, de modo
que una de las ventanas principales daba al paso elevado hacia el Odeon
(el escenario de algunas aventuras memorables má s adelante en mi
vida) y la otra daba al lado opuesto. No habı́a ascensores, ası́ que habı́a
que subir las escaleras para llegar allı́, pero esto no era una mierda de
nadie. Era una urbanizació n victoriana adecuada: alojamiento decente
para gente decente de clase trabajadora que se las arreglaba bien.
Sin embargo, no estoy seguro de có mo los Jones se mantenı́an al dı́a
con los demá s, porque mi abuelo era un idiota perezoso. La historia era
que habı́a evitado tener que luchar en la Segunda Guerra Mundial
poniendo su pie debajo de un tranvı́a para destrozarle la pierna. No sé si
eso era cierto, pero ciertamente nunca trabajó todo el tiempo que estuve
allı́, tal vez debido a la misma lesió n que lo mantuvo fuera del ejé rcito.
Solı́a sentarse allı́ en su silla todo el dı́a fumando cigarrillos mientras
mi abuela salı́a a trabajar limpiando las casas de otras personas. Sin
embargo, se las arregló para comprarse algunas ruedas: un Austin A40
que arrancaba con una manivela. Tener un coche aparcado en la plaza
debajo de los apartamentos era todo un sı́mbolo de estatus en aquella
é poca, aunque siempre se averiaba cuando intentaba llevarnos a
Brighton en é l. Ahora que lo pienso, su pierna no podrı́a haber estado
tan mal si todavı́a pudiera conducir. Recuerdo que a veces me sentaba en
su regazo y me dejaba conducir cuando tomaba el auto para dar una
vuelta por la plaza: mi primera experiencia de manejo para menores de
edad; tal vez de ahı́ saqué el gusanillo.
La mayorı́a de mis recuerdos de esos tiempos son felices. Como mi
abuela dá ndome un bañ o en el fregadero, o haciendo esos increı́bles
budines de sebo al vapor a la antigua en los que extendı́a un pañ o sobre
la parte superior del tazó n y lo ataba con una cuerda. Llenaba el cuenco
con pasas y luego lo cubrı́a todo con melaza de una lata Tate & Lyle
verde y dorada. Hay algunas cosas que sucedieron la semana pasada que
no recuerdo muy bien, pero cincuenta y cinco añ os despué s puedo sentir
lo bien que sabı́a ese budı́n en mi lengua como si me lo estuviera
comiendo ahora mismo.
Mi abuela no me estaba mimando, solo estaba haciendo lo que
cualquier abuelo normal (o padre, llegado el caso) habrı́a hecho: cuidar,
supongo, es como lo llamarı́as. No recuerdo mucho a mi mamá en ese
momento, aunque ella estaba allı́. El apartamento estaba bastante lleno,
por lo que era fá cil perder el rastro de la gente, pero recuerdo que mi
abuela hizo toda la limpieza y preparó las cenas y veri icó que todos
estuvieran bien. ella era genial
Tenı́a la sensació n de que mi abuela siempre habı́a preferido los
niñ os a las niñ as y, como resultado, sus hijos probablemente se habı́an
llevado la mayor parte de su atenció n. Tal vez eso era parte de lo que a
mi mamá no le gustaba que mi abuela fuera tan cá lida y amorosa
conmigo cuando era pequeñ a. La hizo bastante frı́a conmigo cuando yo
estaba creciendo.
Todo lo que sabı́a sobre mi padre (aparte del hecho de que era un
Teddy boy, que fue como é l y mi madre se habı́an conocido) era que se
llamaba Don Jarvis y era un boxeador a icionado de Fulham. Esa fue la
ú nica informació n que mi madre me dio entonces. Creo que me di
cuenta de que no era un tema del que ella estuviera demasiado
interesada en hablar, aunque recuerdo haber ido a una especie de
tribunal a una edad muy temprana donde mi madre esperaba sacarle
dinero. No creo que haya tenido suerte, porque nunca se habı́an casado y
de initivamente estaba teniendo un buen gemido fuera de la corte
despué s.
A mi familia le gustaba quejarse, pero tambié n hubo muchas risas. Mi
abuelo era un cabró n viejo gruñ ó n, pero era gracioso con eso. Me
sentaba en su regazo (no habı́a nada raro allı́, nada tonto) y tenı́a un
trapo en el que soplaba el humo del cigarrillo y luego lo ponı́a sobre mi
cara. Me encantaba el maldito olor de esos cigarrillos. Respirar el humo
de ese trapo fue uno de los mejores y má s reconfortantes sentimientos
que he conocido. Cuando lo volvı́an a poner en el cajó n, gritaba: '¿Dó nde
está mi trapo? ¿Dó nde está mi trapo? No era solo para ocasiones
especiales, era para todas las ocasiones.
Ahora puedo ver que este fue probablemente el comienzo de mi
primera adicció n. No creo que fuera solo la nicotina lo que amaba, era el
hecho de que a mi abuelo le importaba lo su iciente como para echar
humo en el trapo solo porque sabı́a que yo querı́a que lo hiciera. De
cualquier manera, realmente ansiaba ese trapo cuando no lo tenı́a, y
ciertamente no me tomó mucho tiempo progresar a un paquete de
Players No. 6 tan pronto como tuve la edad su iciente para comprar mis
propios cigarrillos (aunque yo me metı́ en Gauloises durante diez
minutos en un momento porque escuché que Ronnie Wood los fumaba;
eran buenos humos fuertes). Unos añ os má s tarde, cuando tomaba
heroı́na, tomaba cinco paquetes al dı́a. Fumas mucho má s una vez que
está s drogado. Como si ya no fuera lo su icientemente insalubre.
Obviamente, no ves el chupete de nicotina recomendado en muchos
manuales para padres en estos dı́as, pero para mı́ fue parte integral de lo
que recuerdo como tiempos realmente buenos. Aunque ella no era
exactamente del tipo maternal, creo que mi madre y yo nos llevamos
bien en esa etapa. Una vez me compró un par de bombers Tesco nuevos,
unos vaqueros de mierda, y unas zapatillas de lona que eran como
Converse pero que no eran Converse. Me encantaba si alguna vez tenı́a
ropa nueva: estarı́a en la cima del mundo en el momento en que tuviera
un poco de clobber fresco, y sentı́ que podı́a caminar erguido a travé s de
las plazas que unı́an los diferentes edi icios de Peabody. .
Habı́a un verdadero sentido de comunidad en esa inca. Habı́a un
boozer en la esquina con una venta libre al lado, y cuando devolvı́amos
las botellas de limonada de R. White para obtener los depó sitos, me
sentaba afuera del pub escuchando al tipo que tocaba el piano. Ese es
uno de mis primeros recuerdos musicales conscientes, aunque vendrá n
muchos má s (y algunos inconscientes que los acompañ ará n).
Tambié n me encantaba ir a las matiné s del cine ABC, a la vuelta de la
esquina en King Street, para ver Commando Cody y todas esas series de
mierda de los sá bados. Preferı́a sentarme en la ú ltima ila, porque no
querı́a estar cerca de todos los otros niñ os, y por alguna razó n me
encantaba cuando el tipo salı́a entre las pelı́culas y decı́a: 'Oigan, niñ os,
¿qué hacen? ¿pensar?' Entonces todo el mundo se irı́a a casa y tendrı́as
que volver la pró xima semana para ver la nave espacial con un poco de
cuerda sostenié ndola.
Mirando hacia atrá s en ellos, estos fueron algunos de los dı́as má s
felices de mi vida. Hice algunos amigos en la propiedad y comencé la
escuela primaria en Flora Gardens en Ravenscourt Park al inal de la
calle. Mis abuelos me amaban. Todo estuvo bien.
Creo que todavı́a habrı́a terminado siendo un alcohó lico incluso si
hubiera tenido una educació n má s encantadora y me hubiera quedado
con mi abuela y sus pasteles de carne y riñ ó n hasta que tuviera la edad
su iciente para irme de casa. Habı́a bastantes grandes bebedores entre
los hombres de mi familia, y yo tenı́a ese gen alcohó lico obsesivo-
compulsivo desde el primer dı́a. Eso no tiene nada que ver con los
escenarios que se han desarrollado en mi vida, es solo quié n soy, o eso
es lo que creo, de todos modos. Pero no creo que los Sex Pistols hubieran
existido alguna vez, al menos, no conmigo en ellos, si no fuera por lo que
me pasó despué s. Aparte de todo lo demá s, las ganas de buscar una vida
mejor no habrı́an estado ahı́, porque ya la habrı́a tenido.
3. ESE LUGAR APESTA A CAUCHO
Ası́ que allı́ estaba yo, pasando un buen rato a la sombra del paso
elevado de Hammersmith, cuando de repente aparece este tipo y mi vida
da un giro hacia el lado oscuro. Ron Dambagella se llamaba, y creo que
mi madre lo conoció en el trabajo. Habı́a tenido algunos trabajos de
medio tiempo. Recuerdo a una como una 'chica del telé fono', que
signi icaba limpiar la saliva de otras personas de los telé fonos en las
o icinas, lo que no puede haber sido un barril de risas. Pero luego
consiguió algo un poco má s permanente en esta fá brica que fabrica
componentes de caucho, no estoy seguro si eran para zapatos o para
cocinas, tal vez para ambos.
De todos modos, despué s de un tiempo la trasladaron a un taller má s
pequeñ o debajo de los arcos, justo al lado de Flora Gardens, mi primera
escuela. Creo que é l estaba a cargo de ese lugar, y siempre los recuerdo a
los dos trabajando solos allı́, porque una vez que se juntaron ella me
decı́a con orgullo: 'Ron es el jefe', y yo pensaba: 'Tú ¡Sois los ú nicos allı́!
Pero cuando le pregunté a mi tı́a Frances sobre esto, lo cual tenı́a que
hacer porque mi madre y yo no hemos hablado durante algunos añ os y
querı́a asegurarme de tener todo lo má s preciso posible, ella me dijo que
habı́a otros empleados tambié n. Aparentemente, el viejo Ron (y era
viejo, unos buenos diez añ os mayor que mi madre, de todos modos)
tenı́a la reputació n de ser 'muy coqueto' con las trabajadoras.
Tendré que entrar en muchos detalles sobre las cosas que sucedieron
en los pró ximos añ os, algunas de las cuales probablemente será n
bastante difı́ciles de leer para cualquiera que haya estado involucrado.
Pero quiero decir desde el principio que no estoy haciendo esto para
hacer quedar mal a mi madre. No tengo absolutamente ningú n interé s
en cubrirla (aunque mi padrastro es un asunto diferente). Entiendo que
su vida no fue fá cil. Me tuvo demasiado joven, cuando tenı́a unos veinte
añ os, mi padre la habı́a dejado, y tal vez ella no sintió que tenı́a
demasiadas opciones, ası́ que puedo ver por qué podrı́a haber bajado un
poco sus está ndares. Probablemente pensó : 'Bueno, tengo este niñ o, que
es un equipaje para muchos hombres, y no voy a conseguir a nadie
mejor'. Mi madre no era cuadrada, de hecho, era un poco moderna: se
teñ ı́a el cabello con rubio decolorado y tenı́a enormes aldabas, ası́ que
apuesto a que Ron no podı́a creer su suerte.
La primera vez que sentı́ que algo estaba pasando fue cuando mi
madre me acompañ aba por King Street a la escuela (me dejaba allı́ de
camino al trabajo) y nos detuvimos en un cruce. No puedo estar seguro
de si esto realmente sucedió o si he desarrollado mi imagen mental a lo
largo del tiempo, pero tengo un recuerdo del viento que atrapó el abrigo
de mi madre y lo abrió , y yo pensando que ella no tenı́a nada. debajo,
bueno, tal vez medias, pero no una falda. Ese destello momentá neo me
hizo girar un poco, y cuando fuera mayor me preguntaba si tal vez
estarı́an tramando alguna mierda pervertida en el trabajo. Sin embargo,
por el momento solo tenı́a seis añ os y todo mi mundo estaba a punto de
irse por el retrete.
Lo siguiente que sé es que este tipo Dambagalla está en la foto. El
nunca vino a visitar a mi abuela, pero supongo que parte del trato para
mi madre al conseguir un nuevo geezer fue para que ella pudiera tener
su propio lugar. Ası́ que nos despedimos de los tiempos felices con mi
abuela y mi abuelo amables y cariñ osos, y comenzamos nuestra nueva
vida de mierda en un só tano de una habitació n en 15 Benbow Road,
Shepherd's Bush. No estaba a mucho má s de una milla de distancia de
donde habı́amos vivido antes, incluso me quedé en la misma escuela,
pero bien podrı́a haber estado al otro lado del mundo.
Joder, ese lugar era sombrı́o. Estaba oscuro, hú medo y horrible y yo
estaba durmiendo en una maldita cama de campañ a en el fondo de lo
que ahora era la cama de mi madre y Ron. El khazi estaba afuera, y
cuando el bañ o de estañ o salı́a en la habitació n delantera, yo era el
ú ltimo en meterse en el agua sucia despué s de que é l se habı́a ido
primero y luego mi madre lo habı́a seguido.
Cuando he hablado con los estadounidenses a lo largo de los añ os
sobre lo que signi icaba ser pobre en Gran Bretañ a en ese momento,
nunca parecı́an entenderlo. No recuerdo tener una nevera o un televisor,
nunca nadie tenı́a duchas, y para el agua caliente estaba el fregadero con
el calentador Ascot encima. Pondrı́a dinero en el medidor para encender
el radiador y la mayorı́a de la gente quitarı́a la cerradura y seguirı́a
poniendo los mismos 10 peniques. Recuerdo cuando fui por primera vez
a Estados Unidos a ines de los añ os setenta, incluso las personas pobres
que estaban cerca de la escalera parecı́a dar por sentado cosas que
siempre habı́a visto como lujos.
Donde crecı́, era bastante normal hacer la vista gorda ante el extrañ o
robo oportunista. Si la gente estaba luchando por salir adelante y podı́a
salirse con la suya robando algo de vez en cuando para llegar a in de
mes, eso tal vez estaba un poco mal visto, pero nadie realmente iba a
reprocharlo. Todos vivı́amos en un nivel de subsistencia, en resumen,
ninguno de nosotros tenı́a una olla para orinar, ası́ que ahora puedo
entender por qué cuando las familias iban juntas al supermercado Tesco
en King Street, a veces los veı́a poner cosas debajo de sus abrigos. Tal
vez no quedaba nada en la casa para la cena y era su ú nica forma de
poner comida en la mesa. En ese momento, sin embargo, realmente no
lo entendı́. Tal vez porque no se habló mucho de eso despué s, estarı́a
pensando, '¿Qué está pasando aquı́?'
En otra ocasió n tuvieron una especie de competencia en Tesco's
donde leı́an un nú mero por megafonı́a y si era tu nú mero podı́as ganar
un premio. No sé có mo sucedió , pero mi madre o Ron deben haber
conocido a alguien dentro, porque apareció su nú mero y ganaron algo,
pero por alguna razó n era obvio que todo no era legı́timo y obtuvieron
retumbó . Todo era un poco una farsa y bastante humillante, pero como
nunca me explicaron nada realmente, lo encontré todo muy confuso.
Algo similar sucedió en la escuela en Flora Gardens cuando tenı́amos
la tarea de hacer un dibujo y traerlo a clase al dı́a siguiente. Uno de los
hermanos de mi madre, creo que era mi tı́o Barry, dibujó algo y se veı́a
bien, ası́ que dijo: "Aquı́ tienes, prueba eso", pero cuando lo llevé a clase
al dı́a siguiente, el maestro se dio cuenta. inmediatamente. Simplemente
me pidió que dibujara lo mismo otra vez y, por supuesto, no pude
hacerlo. Barry no era un gran dibujante, pero no podı́a igualarlo.
Supongo que mirando hacia atrá s, el sentimiento que me dio ese
incidente fue vergü enza, pero en ese momento sentı́ que valı́a un poco
menos que los demá s.
Tambié n era lo mismo en casa. Yo era el segundo violı́n, me pusieron
en la parte de atrá s, mientras que mi madre hizo todo lo posible para
mantener feliz a Ron. Me sentı́ como si estuviera en una competencia,
con mi padrastro, por la atenció n de mi madre, que no podrı́a ganar. No
digo que mi madre se excitara con el poder que esto le daba, pero a
veces se sentı́a como si lo hiciera. Cuando eres niñ o, no piensas en tu
madre de la misma manera que piensas en otras personas. No crees que
tenga derecho a tener defectos de cará cter o hacer cosas de mierda o
simplemente joderla como todos los demá s. Entonces, cuando eso
sucede, puede ser difı́cil de manejar.
Es solo recientemente que comencé a verla como una persona como
cualquier otra y no solo como mi madre. Me encantarı́a saber cuá l fue su
motivació n y có mo era su vida cuando estaba creciendo, pero no creo
que ella sepa por dó nde empezar cuando se trata de esa conversació n.
Golpeé la ventana varias veces cuando todavı́a está bamos hablando,
pero las cortinas se corrieron muy rá pidamente. Si trataba de
preguntarle có mo eran mi abuela y mi abuelo como padres, parecı́a que
la incomodaba mucho, casi como si algo malo estuviera pasando allı́.
Pensarı́as que si no pasa nada, con gusto habları́a al respecto, ¿no es ası́?
Pero no hay forma de saber con mi madre.
Ella decı́a: 'Asegú rate de limpiarte el culo y ponerte ropa interior
limpia cuando salgas de casa... en caso de que tengas un accidente. No
quiero que los mé dicos piensen que tu madre no te cuida. Era como si
eso fuera todo lo que le importaba, no si habı́as tenido un accidente y
'¿Está s bien?' pero, ¿tu trasero estarı́a lo su icientemente limpio como
para re lejar una luz positiva sobre ella?
Mucho de eso era ese clá sico inglé s de '¿Qué pensará n los vecinos?'
Mi respuesta a eso siempre ha sido: '¿A quié n le importa lo que piensen
los vecinos?' Pero era parte integral de la educació n de la clase
trabajadora en Gran Bretañ a en esos dı́as que te lavaban el cerebro para
que te disculparas por vivir en la mierda. Cá llate y sigue adelante, deja
que los ricos sean ricos y los pobres sean pobres, Enrique VIII está allá
arriba en su castillo y todos los demá s está n abajo en sus pequeñ as
chozas de barro.
En cierto modo, los Sex Pistols serı́an el inal de esa forma de pensar,
pero incluso ahora caigo en ella de vez en cuando. A veces, cuando sé
que me estoy subestimando, siento ese viejo re lejo de falta de
autoestima revolvié ndose dentro de mı́: 'Oh, está bien, me las arreglaré
con esto que realmente no quiero porque no tengo el derecho a pedir
algo mejor. La programació n está muy arraigada.
Mi madre no me contó mucho má s sobre Ron que sobre mi verdadero
padre, y nunca tuvo buenas palabras para é l, solo que era un capullo que
nunca hizo pagos de paternidad. Creo que Ron habı́a vivido en East
London antes de que se conocieran, y tuve la sensació n de que tal vez
tenı́a una hija, aunque nunca la conocı́. Má s tarde descubrı́ que todavı́a
estaba casado cuando é l y mi madre se juntaron, lo que podrı́a explicar
por qué nunca se casaron, aunque permanecieron juntos hasta que é l
murió hace unos añ os, por lo que deben haberse amado en a su manera
Por su piel oscura, cabello negro azabache y nombre que sonaba
extranjero, tuve la impresió n de que tal vez Ron habı́a venido
originalmente de Italia, o tal vez de Turquı́a o Grecia; fá cilmente podrı́a
haber habido un poco de Bubble (burbuja y chirrido = griego) allı́
dentro, pero tampoco se habló mucho de esto. De hecho, nada lo fue. Sin
decir mucho, Ron dejó bastante claro que hubiera preferido que yo no
estuviera allı́ para poder tener a mi madre para é l solo. Rá pidamente
aprendı́ a no hacer demasiadas preguntas, porque la curiosidad parecı́a
estar mal vista. Solo en los ú ltimos añ os comencé a encontrar algunas de
las respuestas que una persona que creció en una familia normal habrı́a
sabido todo el tiempo.
A menudo me preguntaba qué pensarı́an mi abuela y mis tı́os de Ron,
porque tenı́a la impresió n de que tal vez no era popular entre el resto de
la familia. Ası́ que le pregunté a mi tı́a Frances si esto se debı́a a que la
familia desaprobaba la forma en que mi madre y Ron se juntaban, y ella
dijo que era má s probable porque los hermanos y hermanas no eran
cercanos. Tambié n dijo que mi abuelo era un viejo gruñ ó n que no salı́a
de la casa, pero si un viaje al 15 de Benbow Road era todo lo que se
ofrecı́a, realmente no lo culpo.
Nadie habrı́a regresado a ese truco lú gubre voluntariamente, eso es
seguro. Todo el tiempo que vivı́ con mi madre y Ron cuando era niñ o,
despué s de unos añ os en el só tano de Benbow Road, nos mudá bamos a
un apartamento en la planta superior de la misma casa, y luego mi
madre consiguió un apartamento de protecció n o icial en Battersea.
nunca los recuerdo invitando a amigos o familiares. Encontré eso raro
en ese momento y todavı́a lo hago ahora. No digo que mi madre y mi
padrastro fueran como los Moros Asesinos, pero Ian Brady y Myra
Hindley probablemente tenı́an má s visitas.
El taller debajo de los arcos del ferrocarril donde Ron era supervisor
era aú n peor. Obviamente, esto no era culpa de mi madre y de Ron, no
estaban pasando el rato allı́ para divertirse, pero odiaba cuando tenı́a
que ir allı́. Todo ese lugar apestaba a goma, el techo curvo y las paredes
de ladrillo desnudo lo hacı́an realmente claustrofó bico, y habı́a una gran
má quina de mierda de la que salı́a vapor que pisoteaba anillos de goma
durante todo el dı́a. Hacı́a tanto ruido que no se podı́a oı́r lo que decı́an
los demá s. Era como algo sacado de la pelı́cula Eraserhead .
El ú nico rayo de sol que llegó a mi vida durante este tiempo oscuro y
deprimente fue cuando tuve un perro. Era solo un pequeñ o perro
callejero, pero su nombre era Brucie y me acerqué mucho a é l muy
rá pidamente. Ese perro era jodidamente genial y realmente me amaba,
pero un dı́a llegué a casa de la escuela y ya no estaba. Mi madre me
acaba de decir: 'Oh, Brucie se ha ido'.
Ella nunca explicó lo que le habı́a pasado, ası́ que asumı́ que
simplemente se deshicieron de é l porque era demasiado trabajo. Sentı́
que lo mismo podrı́a pasarme en cualquier momento cuando vivı́a en
Benbow Road, y en un par de momentos sucedió .
Aquı́ es donde las brechas en mi memoria realmente comienzan a
ensancharse, presumiblemente porque estaba tan molesto por algunas
de las cosas que estaban sucediendo que mi mente simplemente trató de
cerrarlas. La tı́a Frances tampoco puede ayudar porque, como ya he
mencionado, perdió el contacto con nosotros una vez que nos mudamos
a Shepherd's Bush. Má s tarde, cuando era adolescente, me enviaron a
varias instituciones diferentes por una variedad de razones
(principalmente relacionadas con que me robaran), que generalmente
puedo recordar bastante bien, pero hay un lugar al que medio recuerdo
que me llevaron poco despué s. llegamos a Benbow Road y no tengo ni
puta idea de qué , o dó nde, era, o por qué tenı́a que ir allı́.
De lo ú nico que estoy seguro es de que estaba en el campo y solo
estuve allı́ una semana. No creo que fuera un castigo, creo que era una
especie de hogar para niñ os, ası́ que tal vez mi madre no podı́a cuidarme
y nadie má s estaba dispuesto a aceptarme porque yo era demasiado
problemá tico. Sin embargo, no es como si fuera un gamberro total en esa
etapa: solo era un niñ o pequeñ o cuando me enviaron allı́.
El ú nico recuerdo claro que tengo es que cuando llegué tenı́an una
camada de gatitos en una cesta en el pasillo. Todos los amantes de los
gatos deberı́an mirar hacia otro lado ahora, no quiero poner a la gente
de los gatos en mi contra en esta etapa temprana, el gatito estará en
su iciente peligro má s adelante, pero estaba tan jodidamente enojado
por tener que estar allı́. que empecé a tratar de estrangularlos. Estos
pobres cabrones solo han nacido unos dı́as y ya tienen mis manos de
niñ o traumatizado cerrá ndose alrededor de sus gargantas. Me alegro de
decir que no lo hice, pero seguro como el in ierno que extrañ é a Brucie.
Tu cerebro aú n se está desarrollando cuando eres joven, y cuando
está s bastante aislado y estableces un apego tan estrecho como ese,
incluso si es solo con un animal, y ese contacto se pierde, puede
marcarte. De repente, esa cosa que te hacı́a sentir que importabas ha
desaparecido, y no recuperas la esperanza de recuperarla. Cuando la
cicatriz se cura, se pone un poco dura. No es de extrañ ar que no pueda
tener una puta relació n adecuada con una mujer... pero no sigamos por
ese camino todavı́a.
Por el momento, el principal efecto secundario de lo jodidamente
miserable que me sentı́a era que comencé a atrasarme aú n má s en la
escuela. No sabı́a leer ni escribir tan bien desde el principio, de todos
modos. Cuando se trataba de todos los có mics para niñ os con pequeñ as
historias como The Hurricane y The Topper , en realidad solo miraba las
imá genes. Pero cuanto má s infeliz era, má s jodı́a, hasta que inalmente
me retrasaron un añ o por no aprender lo su iciente.
Si yo fuera un niñ o en la escuela ahora, probablemente me
diagnosticarı́an dislé xico y/o TDAH bastante rá pido, pero no habı́a
enseñ anza de 'necesidades especiales' en esos dı́as. O al menos, ninguno
que me aplicara en las escuelas a las que fui. Supongo que parecı́a un
niñ o normal, solo un poco má s loco que los demá s. Mi problema era que
no podı́a retener las palabras en mi cabeza cuando salı́an de la pá gina.
Incluso ahora, en la vejez, cuando he tomado medidas para ordenarme
en el frente de la alfabetizació n, todavı́a me cuesta concentrarme; es
como si no estuviera escuchando en mi cabeza lo que estoy leyendo,
porque mi mente ya está distraı́da. pensando en un par de calcetines o
algo ası́.
Nunca he sido el tipo de persona que se jacta de no haber leı́do un
libro completo una vez. Esto siempre fue una fuente de vergü enza para
mı́, y otra razó n por la que nunca presté atenció n en la escuela ni por un
jodido segundo. Fue la primera de una serie de situaciones en las que se
hizo má s fá cil encontrar una manera de bloquear la realidad que
enfrentarse a ella. Nadie estaba diciendo, 'Tal vez este niñ o podrı́a ser
dislé xico'. No en la escuela, y ciertamente no en casa, donde nadie tenı́a
nada má s que las peores expectativas de mı́, acadé micamente. Los
maestros asumieron que mi destino era joder y meterme en problemas,
y ası́ lo hice. No era como si sintiera que tenı́an algo contra mı́, solo que
lo que estaban enseñ ando realmente no tenı́a nada que ver conmigo.
4. EL NONCE EN EL PASO
SUBTERRÁNEO
Me sucedieron un par de cosas extrañ as justo antes de que nos
mudá ramos a Benbow Road y me olvidé de contarte. Cualquiera que
piense que este libro ha sido un poco Mary Poppins hasta ahora, bueno,
aquı́ es donde David Lynch golpea al faná tico.
Junto a los hitos má s cé lebres del á rea de Hammersmith (el Odeon, el
Palais, el paso elevado, el puente, Broadway), el pedó ilo local era otro
elemento ijo del vecindario. Cada á rea tiene uno (o por lo general
mucho má s de uno, má s es la pena). Supongo que tienen un rango que
cubren, de la misma manera que lo hacen los zorros urbanos, y el
territorio de este se extendı́a hasta Shepherd's Bush, que se volverı́a
signi icativo unos añ os má s tarde... ası́ que archiva eso por el momento
en la parte de tu memoria marcada como 'hechos ominosos'.
Una vez, y fue cuando todavı́a vivı́a en Riverside Gardens, ası́ que sé
que no tenı́a má s de seis añ os, este tipo trató de atraerme al paso
subterrá neo debajo del paso elevado de Hammersmith. No lo hizo con
dulces o chocolates como decı́a que debı́a hacer en los anuncios de
'peligro de extrañ os', sino arrancando pá ginas de un catá logo de lencerı́a
y dejá ndolas frente a mı́ para dejar un rastro, como las malditas migas
de pan en ' Hansel y Gretel'.
La pregunta que me he hecho mucho es: '¿Có mo supo é l que esto
funcionarı́a?' Tienes que tener en cuenta que vivı́a feliz en casa de mi
abuela. Todavı́a no me habı́a pasado nada malo y acababa de empezar la
escuela. Té cnicamente, todavı́a era un niñ o puro e inocente. Y, sin
embargo, de alguna manera sabı́a que, si hacı́a esto, lo seguirı́a. Creo que
tal vez algunos niñ os emiten má s energı́a sexual que otros, y son los que
son vulnerables a los depredadores. Es como si estuvieras marcado de
una manera que solo ellos pueden ver.
Por alguna razó n, yo era uno de esos niñ os. Deberı́a haber estado
pensando: '¿Por qué ese tipo espeluznante arranca pá ginas de esa
revista y las tira en las escaleras?' Pero en lugar de eso, porque soy este
ser prematuramente sexual, estoy interesado. Puedo ver exactamente
dó nde sucedió esto muy claramente en mi mente: fueron los escalones
que bajan debajo del lado de Chiswick del paso elevado, el camino por el
que irı́as si te dirigieras al rı́o. Estaba tratando de sacarme de mi
territorio habitual y alejarme de la seguridad.
Yo no querı́a ir con é l, pero sı́ querı́a poner mis manos en esas fotos
de pá jaros que me estaban emocionando por razones que no entendı́a.
Lo seguı́ por las escaleras y en la oscuridad hasta un punto donde, y lo
recuerdo muy claramente, pude ver la luz detrá s de é l desde la salida en
el otro extremo. No era un tú nel largo, solo debajo de la carretera, pero
pude verlo subiendo las escaleras y pensé : 'A la mierda, me voy a casa'.
Por el momento, al menos iba a quedarme en mi propio territorio, lo
cual, no necesito añ adir, fue en gran medida la decisió n correcta.
Otra cosa extrañ a sucedió en ese entonces. Una vez má s, todavı́a
vivı́amos con mi abuela, por lo que las cosas aú n no habı́an comenzado a
oscurecerse. Pero un dı́a estaba jugando en las plazas con otros niñ os
cuando esta niñ a, no mucho mayor que yo y realmente no la conocı́a, se
bajó las bragas. Tal vez las cosas no estaban bien en su propia casa o tal
vez este tipo de exhibicionismo es bastante normal en algunos niñ os de
seis añ os. No sé . Una cosa que les diré con seguridad es que mi reacció n
no fue la misma que la de los otros niñ os. Se bajó las bragas y allı́ estaba
su culito de mierda. Todos los demá s niñ os se echaron a reı́r, pero yo me
quedé allı́ mirá ndola. Estaba totalmente paralizado, era tan jodidamente
sexual. Ella nunca se movió tampoco. No nos tocamos, pero estuve
parado allı́ en trance durante tanto tiempo que para cuando me
desperté , si algú n cabró n descarado hubiera tenido tiempo de robarme
la bicicleta.
Má s tarde, cuando estaba re lexionando sobre mi vida y tratando de
entender có mo diablos llegué a conectar el robo con los sentimientos
sexuales, este incidente fue obviamente difı́cil de superar. Pero ese tipo
de cosas son realmente profundas y una vez que intentas resolver las
cosas, debes tener cuidado de no sacar conclusiones obvias. A los
terapeutas les encanta saltar sobre algo como esto y decir que es la
razó n de todo, pero la vida no es tan simple. ¡Un maldito forastero
incluso sugirió que tal vez robé tantas cosas en los añ os siguientes
porque estaba tratando de compensar la pé rdida de mi bicicleta!
No hay escasez de pruebas para cualquiera que intente averiguar por
qué terminé de la forma en que lo hice. En otra ocasió n estaba en los
columpios del patio de recreo de la escuela en Flora Gardens y habı́a
niñ as alrededor rié ndose de mı́. A las chicas solı́a gustarles porque era
lindo, aunque era bastante tı́mido con ellas hasta que descubrı́ el
alcohol. Pero todavı́a era de initivamente uno de los chicos má s geniales,
ası́ que no estaba acostumbrado a que la gente se burlara. No sabı́a por
qué todos se reı́an de mı́ hasta que me di cuenta de que mi polla colgaba
de mis pantalones cortos. Me dio tanta vergü enza y vergü enza porque
no sabı́a có mo hacer que se detuvieran. Por supuesto que lo descubrirı́a
al inal, pero eso no serı́a hasta dentro de unos añ os.
Hay otro incidente de este tipo que probablemente no pueda dejar de
mencionar, aunque me gustarı́a. Pero si trato de ser honesto sobre mi
pasado, tiene que ser todo o nada. Mi madre caminaba conmigo por la
calle principal de Hammersmith. Parecı́a tarde en la noche, pero tal vez
solo era temprano en el invierno, ya que probablemente solo tenı́a siete
u ocho añ os en ese momento. De cualquier manera, las tiendas estaban
cerradas. Pero en algú n lugar de King Street, mi madre se detuvo en una
tienda de lencerı́a para mirar las cosas en la ventana. Sin pensar
realmente en lo que estaba haciendo, empujó la puerta principal y
descubrió que la habı́an dejado abierta cuando se fueron a casa. No
habı́a nadie allı́, por lo que todas estas cosas que normalmente no habrı́a
podido pagar eran gratis para un buen hogar. Estaba realmente
sorprendida y emocionada. Recuerdo que dijo: '¡Fó llame!' – no es su
escaparate habitual.
No necesitas ser ese pá jaro psiquiatra en Los Soprano para ver que la
combinació n de tener la atenció n de mi madre, sus palabrotas, la
lencerı́a en la ventana y la emoció n de salirse con la suya podrı́a haber
tenido algú n tipo de impacto en mi sexualidad. desarrollo. Pero cuando
se trata de esas aguas turbias, hay un gran lucio en el estanque de peces
que aú n no tengo.
No importa el pedó ilo en el paso subterrá neo, la mayorı́a de las
veces es el que vive en la misma casa que tú de quien realmente debes
preocuparte. Al menos, ası́ fue como funcionó en mi caso. Llevá bamos
unos añ os en Benbow Road cuando mi padrastro me toqueteó . Debı́a de
tener diez u once añ os, porque para entonces ya nos habı́amos mudado
a un apartamento un poco má s grande en la misma casa que tenı́a un
inodoro y un bañ o. Té cnicamente está bamos subiendo en el mundo,
pero no se sentı́a de esa manera.
Mi madre estaba en el hospital cuando sucedió . Tal como lo recuerdo,
tuvo un aborto espontá neo y tuvo que quedarse en el hospital por un
tiempo despué s. No estoy 100 por ciento seguro de que eso haya
sucedido, pero eso es lo que recuerdo. No sé cuá nto tiempo estuve sola
en la casa con é l. Frances dijo que pensó que esta era una vez que me
enviaron a un hogar de niñ os por un tiempo, pero si eso sucedió , no
sucedió lo su icientemente rá pido como para evitar que me jodieran.
Una noche, Ron está en la cama en Benbow Road cuando me llama
para verlo. Por lo general, no reconoce mi existencia a menos que sea
absolutamente necesario, pero cuando se dirige a mı́ directamente,
generalmente hay un poco de intimidació n. Ası́ que no iba a decir que
no, a pesar de que no tenı́a ninguna razó n para pensar que algo bueno
iba a salir de eso (y no fue ası́). De todos modos, no he estado en el
dormitorio mucho antes de que empiece a intimidarme para que lo
masturbe. solo soy un niñ o ¿Qué carajo sé ? No tengo ni idea de lo que
está pasando, pero estoy solo con é l y no parece haber otra opció n que
no sea estar de acuerdo con lo que é l quiere. Ası́ que eso es exactamente
lo que hago: jugar con su polla hasta que se corre, con é l cernié ndose
sobre mı́ todo el tiempo dicié ndome lo que tengo que hacer.
Todo lo que recuerdo haber sentido inmediatamente despué s fue un
poco desconcertado, solo pensé : 'Eso fue... extrañ o'. Pero las
consecuencias de lo que pasó siguen conmigo medio puto siglo despué s.
Nunca se lo conté a nadie durante añ os, y se siente bastante extrañ o
poner esto en un libro incluso ahora. Pero saber el dañ o que me hizo
toda la confusió n que sentı́ durante los añ os intermedios me hace
querer hacer todo lo posible para que cualquiera que haya estado en una
situació n similar sepa que no está solo.
Obviamente, Ron tendrı́a que estar un poco enfermo para hacer lo
que le hizo a un niñ o de diez añ os. Ciertamente nunca tuve la impresió n
de que é l sintiera alguna conciencia al respecto despué s. Solı́a
preguntarme si se lo habrı́a hecho a otros niñ os, pero mi instinto decı́a
que probablemente no. Se sentı́a má s como parte del juego de poder
alrededor de mi madre, una de esas cosas de macho alfa, como algo que
sucederı́a en la prisió n, donde tuvo la oportunidad de dejarme su marca
y ası́ lo hizo. Nunca lo intentó de nuevo, pero si su objetivo era solo
joderme, ya habı́a logrado ese objetivo, entonces, ¿por qué se
molestarı́a?
Siempre habı́a querido deshacerse de mı́ para poder tener a mi
madre para é l solo, y ahora prá cticamente se habı́a salido con la suya. A
partir de ese momento, nunca quise estar en casa. No me sentı́a seguro
allı́. No estaba activamente en peligro, solo me sentı́a amenazado por su
presencia, y é l parecı́a deleitarse con eso. Supongo que cuando un adulto
que debe cuidarte hace algo ası́, cambia la forma en que te sientes acerca
de las personas en general.
Un niñ o abusado que no tiene a nadie con quien hablar a menudo
pensará que lo que sucedió es su culpa, aunque en algú n nivel saben que
no lo es. Eso fue ciertamente cierto para mı́. Otra respuesta comú n es
enojarse y portarse mal, y yo tambié n lo hice, aunque no
necesariamente de la forma esperada.
¿Recuerdas ese nonce local que mencioné al comienzo del capı́tulo?
Bueno, cuatro o cinco añ os despué s todavı́a rondaba por la zona como
un mal olor, y mi confusió n era su oportunidad. Me encontré con é l en la
calle poco despué s de que sucediera lo de mi padrastro, empezó a darme
vueltas, fui a por é l y lo dejé chuparme la polla por algo de dinero. ¿No es
raro? Vivo en un có digo postal diferente a donde se lo probó antes, pero
este mismo maldito pedó ilo aú n logra encontrarme. Este idiota debe
haber tenido algú n tipo de supersentido que le dijo que estaba
confundido y lo su icientemente vulnerable como para que é l me
culpara para obtener lo que querı́a.
No es como si llevara una placa que decı́a: 'Mi padrastro acaba de
abusar de mı́', pero algo ası́ jode con tu idea de normalidad. Una vez que
sucedió la primera vez, supongo que es má s probable que vuelva a
suceder, porque a partir de ese momento hay una vocecita en tu cabeza
que piensa que esto es lo normal.
No tenı́a má s de once añ os en ese momento, tal vez solo diez, pero de
cualquier manera, de initivamente todavı́a estaba en la escuela primaria
en Flora Gardens. Ocurrió en el hueco de una escalera junto a una
gasolinera en Goldhawk Road en Shepherd's Bush. El pedó ilo estaba
tratando de chupá rmelo y tenı́a un pedal (y una manivela) mientras
estaba en eso. Obviamente fue una transacció n sexual desde su punto de
vista, pero no desde el mı́o. De initivamente no tenı́a la edad su iciente
para eyacular incluso si hubiera sentido la inclinació n.
No sé qué le pasó al tipo despué s, si lo encerraron o no por hacer una
mierda como esta, pero todos en el á rea sabı́an quié n era. Má s tarde,
cuando me hice amigo de Paul Cook, é l tambié n sabı́a de é l, aunque
nunca le conté lo que habı́a pasado. De hecho, nunca antes lo habı́a
mencionado en pú blico, y casi nunca en privado. Es lo que clasi icarı́as
como noticias de ú ltima hora.
Eran muchos secretos para llevar en mi cabeza con solo once añ os.
Tenga en cuenta que realmente no puedo leer ni escribir correctamente
y no es de extrañ ar que mi carrera en la escuela secundaria no haya
tenido el mejor comienzo. Llegué a la escuela integral para niñ os Sir
Christopher Wren en Bloemfontein Avenue en White City y me pusieron
directamente en la clase de locos.
Mi mayor preocupació n en este momento de mi vida estaba en mis
pantalones. Por alguna razó n, me sentı́ abrumado por la humillació n
ante la idea de que tenı́a una pequeñ a polla sin pelos alrededor. Era el
momento en que los cuerpos de todos se desarrollaban a su propio
ritmo. No fui el primero en salir de los bloques en lo que respecta a la
pubertad, eso es seguro, y el hecho de que sabı́a que era un añ o mayor
probablemente me presionó un poco má s: verı́a a estos niñ os con
grandes pollas. y pelo por todas partes y me convirtió en un caso
perdido. Esto se convirtió en un problema tan jodido para mı́ que solı́a
pasar todo el tiempo torturá ndome por el hecho de que iba a tener que
ducharme con todos despué s de hacer deporte. Estaba obsesionado con
no querer que nadie viera mi polla, hasta el punto de dejarme la ropa
interior puesta en la ducha y decirles a todos que algo raro me pasaba
en lugar de enfrentarme a la mú sica imaginaria.
Por supuesto que todo estaba en mi cabeza. Si me hubiera metido en
la ducha con mi carne inadecuadamente adornada y dos verduras a la
vista como todos los demá s, nadie hubiera dicho: 'Ja, ja, mı́rate'. Pero
supongo que fue una señ al de cuá nto estaba luchando que me
obsesionara con estos detalles de una manera tan autodestructiva. No es
como si fuera uno de los niñ os nerds. Mis compañ eros nadadores en la
corriente de fondo probablemente habrı́an pensado que estaba a la
moda, y si estuvieras aquı́ conmigo ahora, felizmente te mostrarı́a mi
polla para asegurarte de que tiene al menos un tamañ o normal, si no del
todo. magnı́ ico.
Puedo ver ahora que al menos parte de la sensació n de vergü enza
que tenı́a por mi cuerpo probablemente provino de lo que habı́a
sucedido con mi padrastro y luego el tonto. Pero eso no se me ocurrió
entonces. De cualquier manera, arruinó mi educació n. Irı́a allı́ un lunes
pensando: 'Oh, mierda, voy a tener que ducharme en cinco dı́as a partir
de ahora', y cualquier pequeñ a posibilidad de concentrarme en lo que
debı́a suceder en clase se irı́a. directamente por la ventana.
Todo se redujo a que no me sentı́a có modo conmigo mismo. Estas
experiencias de abuso me habı́an sacado de alineamiento con el mundo.
No parecı́a haber forma de escapar de sentirme ası́, ni en la escuela ni en
casa, y toda la mierda en la que empecé a meterme a partir de ese
momento (robo, bebida, drogas, pá jaros) era bá sicamente tratar de irme.
esa sensació n de incomodidad detrá s. Solo estaba buscando una manera
de sentirme bien, y no me preocupaba demasiado quié n salı́a lastimado
en el proceso.
¿Hubiera sido un buenı́simo dos zapatos sin la ayuda de mi
padrastro? (Bueno, té cnicamente fue mi mano la que ayudó , pero sabes
a lo que me re iero). Probablemente no. Sin embargo, no creo que fuera
un niñ o tan malo antes de eso. Si alguna vez hubiera jugado a las hojas
de té antes, habrı́a sido solo una vez, lejos de la ola de crı́menes de un
adolescente en el oeste de Londres en la que estaba a punto de
convertirme.
A menudo me he preguntado si las cosas habrı́an sido diferentes si
hubiera podido contarle a alguien lo que sucedió en ese momento. Mi
mamá no tenı́a manera de saberlo – Ron ciertamente no se lo iba a decir,
y no es como si yo tratara de hablar con ella sobre eso y ella me callara.
Probablemente lo hubiera hecho, pero realmente no puedo reprocharle
eso cuando no le di la oportunidad de probar que estaba equivocado. Sé
que notó un cambio en mi comportamiento a partir de ese momento,
porque lo mencionó en una entrevista que hizo para un libro de Sex
Pistols unos añ os despué s, pero todo lo que dijo fue que 'parecı́a estar
muy molesto' porque tuvo un aborto espontá neo. . ¡Ella no sabı́a ni la
mitad!
No puedo negar que he sentido mucha ira hacia ambos a lo largo de
los añ os, pero ahora no siento tanto hacia mi madre. Si no hubiera sido
porque me interpuse en el camino, probablemente hubiera podido
conseguir a alguien mejor que Ron de todos modos. Cuando está s
soltero con un niñ o, no vas a conseguir la elecció n de la camada en lo
que respecta a los vejestorios, ¿verdad? Ası́ que apareció este capullo y
ella se las arregló con é l, realmente no puedo culparla por eso. Y si
hubiera tenido un lugar seguro para retirarme y lamerme las heridas, no
habrı́a tenido la motivació n para ir en busca del tipo de aventuras que
me ayudarı́an a olvidarlas.
Cuando se trata de lo que me de ine como persona, muchas de las
mejores cosas de mi vida han surgido debido a las peores cosas, lo cual
es extrañ o cuando tratas de pensar en la intervenció n divina y todas
esas tonterı́as. Serı́a un tipo de Dios bastante retorcido que dirı́a:
'Abusemos de ese niñ o para que pueda descarrilarse y formar una
banda'. Pero mirando hacia atrá s, siento que alguien o algo, Dios, el
destino, como quieras llamarlo, de initivamente me lanzó un salvavidas
al darme mú sica a la que aferrarme. Sin eso, estaba en serio peligro de
ser arrastrado por una marea de mierda jodida.
Justo en medio de mi tiempo má s oscuro en Benbow Road, escuché
un ruido que me gustó que venı́a de la ventana de nuestros vecinos. El
tipo de al lado tenı́a uno de esos pequeñ os tocadiscos Dansette y estaba
tocando el '45 de Jimi Hendrix' 'Purple Haze'. Tan pequeñ o como debe
haber sonado, realmente me habló . No tanto las palabras de la canció n,
nunca me ha preocupado demasiado la letra, incluso hasta el dı́a de hoy,
solo la sensació n de todo y la forma en que encajaba.
Habı́a algo pegadizo al respecto, ası́ como el poder, y me encantaba la
sı́ncopa, la forma en que la guitarra de Hendrix hacı́a un 'Clunk' y luego
'¡Weeeoh!' Me encantó tanto que no dejarı́a que dejaran de jugarlo. Me
paré en la calle frente a su ventana gritando '¡Tó cala de nuevo! ¡Juega de
nuevo!' hasta que los volvı́ medio locos. En este punto, nunca habrı́a
soñ ado con intentar convertirme en un hé roe de la guitarra, pero una
cosa era segura: necesitaba una jodida salida, y la mú sica me la darı́a.
5. MOONSTAMP DE CABEZA PIEL
La abrumadora realidad de mi vida en ese momento era que no querı́a
estar en la misma casa que mi padrastro. Esto probablemente me dio
una ventaja sobre otros niñ os de mi edad en té rminos de cuá n lejos
estaba dispuesto a ir en busca de emociones. Efectivamente, estaba
huyendo, pero una vez que comencé a subirme a los autobuses o trenes
subterrá neos y me dirigı́ al West End, me pareció emocionante explorar
la ciudad por mi cuenta.
Estaba bastante verde y dado mi atractivo aparentemente irresistible
en lo que respecta a la fraternidad de pedó ilos, probablemente tuve
suerte de no terminar siendo arrojado en la parte trasera de una
camioneta y llevado a Dolphin Square para ser golpeado y asesinado por
algunos. maldito diputado tory malvado. Ya sea que esté hablando del
lado del establecimiento, e incluso si la policı́a no lo cree, algunas
personas aú n creen que los niñ os fueron asesinados en ese lugar, pero
todo se encubrió despué s, o Jimmy Savile aterrorizando a Top of the
Pops. vestidor, ha tomado añ os para que la verdad saliera a la luz acerca
de cuá nta mierda de pedó ilos VIP estaba pasando en Londres en ese
momento. Todavı́a no creo que hayan hecho má s que arañ ar la
super icie.
Al inal resultó que, lo peor que me pasó en mis primeros viajes al
West End fue que unos estafadores callejeros me estafaran jugando
Three-card Monte (o como se llame a eso cuando se trata de dados
debajo de tazas). Conoces a esos tipos con las cajas naranjas que está n
trabajando juntos para que pongas tu dinero para que puedan
quitá rtelo, pero si eres tan ingenuo como yo, ¿no te das cuenta? Todavı́a
tengo un recuerdo tan claro de lo seguro que estaba de qué copa estaba
debajo: juré a ciegas que iba a ganar y cuando estos cabrones me
quitaron el dinero, la ú nica palabra para describir có mo me sentı́ fue
'violado'. .
Supongo que es extrañ o que la palabra me venga a la mente cuando
habı́a estado en otras situaciones que parecı́an encajar mejor. Pero
pensá ndolo bien, tal vez eso no sea nada extrañ o, porque a veces la
ú nica forma de lidiar con ese tipo de cosas es mantenerlas a una
distancia segura. Y yo estaba jodidamente devastado por el dinero.
Podrı́a haber sido tanto como diez, que era mucho entonces, y la
probabilidad de que lo hubiera conseguido deshonestamente no me hizo
sentir mejor por perderlo.
¿Se me habrı́a ocurrido que ası́ era como probablemente se sintieran
todas las personas a las que les quité cosas? Ni por un segundo. Todo lo
que me importaba era asegurarme de nunca volver a caer en un truco
tan obvio. Yo era solo un joven entonces, todavı́a estaba muy lejos del
criminal empedernido de añ os posteriores, pero eso fue un gran
aprendizaje para mı́: alejarme de la situació n, sabiendo que habı́a
terminado.
Se notaba por el tipo de cosas que me robaba lo niñ o que todavı́a era.
Los accesorios de maquetas de trenes Hornby fueron una de mis
primeras paradas en el ramal del hurto. Iba a Hamleys, la gran tienda de
juguetes de Regent Street, y volvı́a con todas estas cosas para el increı́ble
juego de trenes que a veces me permitı́an colocar en el suelo de la sala
de estar del piso de arriba en Benbow. La carretera. Estaba obsesionado
con los detalles de los motores, y lo mejor de ellos era que simplemente
abrı́as el paquete y ahı́ estaban. No como con los kits de Air ix, en los
que me hubiera encantado el producto inal de un caza o un bombardero
de la Segunda Guerra Mundial, pero debido al dé icit de atenció n
simplemente no tuve la paciencia para hacerlos. Bueno, lo intenté un par
de veces, pero el mı́o salió má s como un tren descarrilado.
No ser capaz de leer las instrucciones probablemente no ayudó , pero
lo principal fue que simplemente no entendı́ el concepto de grati icació n
retrasada. ¿Por qué querrı́a pasar semanas y meses minuciosamente
haciendo uno cuando podrı́a salir y robar algo má s que tuviera el mismo
nivel de detalle y todo el trabajo ya hecho?
La grati icació n instantá nea tambié n era el nombre del juego en mi
otra especialidad criminal principal, que en los primeros dı́as de mi
reinado de terror era robar bicicletas. Habı́a una tienda de bicicletas
adecuada en Putney Road, justo al sur del rı́o; creo que se llamaba
Holdsworth's. Solı́a cruzar el puente de Hammersmith, girar a la
izquierda por el camino de sirga hacia Putney, luego salir a la derecha de
esta calle y salir cerca de la tienda de bicicletas. Me quedarı́a allı́
esperando hasta que algú n tipo se bajara de su increı́ble corredor del
Tour de Francia para entrar allı́, luego, si no cerraba su bicicleta
correctamente, me irı́a por el camino de sirga antes de que nadie supiera
que habı́a desaparecido.
Conseguı́ algunas bicicletas bastante sabrosas de esa manera. Solı́a
esconderlos en la tolva de carbó n del só tano de Benbow Road. Y no pasó
mucho tiempo hasta que pasé de robar bicicletas a robar ciclomotores.
Eran fá ciles de poner en marcha: solo tenı́a que pedalearlos y
prá cticamente arrancaban. Tuve algunas buenas carreras arriba y abajo
de ese camino de sirga. Recuerdo que una vez me persiguió el Viejo Bill
con alguien en la parte de atrá s, no recuerdo quié n.
Al principio de mi carrera como ladró n, tenı́a un historial decente de
no ser atrapado. Una vez, cuando todavı́a no tenı́a má s de doce añ os,
estaba robando en los grandes almacenes Selfridges, uno de mis otros
lugares favoritos del West End, cuando este viejo dice: '¡Oye!' Pensé que
me habı́a pillado, pero gradualmente me di cuenta de que solo querı́a un
niñ o dulce y emocionado para demostrar un juguete para una historia
en el perió dico. Se llamaba Johnny Astro y era esencialmente un globo
que tenı́as que aterrizar en la super icie de la luna usando el aire de un
ventilador. Puedes ver la mirada sospechosa en mi rostro en la foto que
tomaron, porque todavı́a no puedo creer que no me hayan cortado. El
hecho de que esta foto apareciera en el Sol fue solo la guinda del pastel.
Esta fue mi primera aparició n en la prensa sensacionalista, pero no serı́a
la ú ltima.
El tipo que tomó la foto no tenı́a idea del pequeñ o ladró n con el que
estaba tratando. Supongo que las personas que no son ladrones
empedernidos pueden ser un poco ingenuas cuando se trata de darse
cuenta de que los niñ os no traman nada bueno. Puedo saber cuá ndo
alguien está en eso en dos segundos; realmente hay pocos dichos má s
ciertos que 'se necesita uno para conocer uno'. Y eso no solo se aplica a
los ladrones: lo mismo ocurre con los drogadictos. Si está s drogado,
puedo olerlo en ti, porque yo era ese tipo. En realidad es un dolor en el
culo, porque aunque ya no estoy haciendo esas cosas, mi cabeza todavı́a
está llena de ellas. No puedes relajarte porque constantemente tienes las
antenas encendidas, como si nunca dejara nada tirado detrá s del
escenario en un concierto, en caso de que haya un Steve Jones alrededor.
Supongo que hay una especie de justicia en eso de alguna manera.
Lo primero que mi amigo Paul Cook (Cookie para el resto de este
libro, no tiene sentido pararse en la ceremonia despué s de todos estos
añ os) dice que recuerda haber notado sobre mı́ una vez que nos hicimos
amigos fue que siempre estaba "haciendo cosas furtivas con bicicletas en
el só tano". '. Nuestros caminos se habı́an cruzado algunas veces antes de
eso cuando é ramos un poco má s jó venes, caminando a nuestras
diferentes escuelas primarias. Creo que nuestras madres se conocı́an
vagamente por alguna razó n que nunca entendı́ del todo, porque solı́an
saludarse con la mano al otro lado de la calle. Sin embargo, nunca fue
mucho má s allá de un hola rá pido.
Nos tomó un poco de tiempo conocernos una vez que ambos
comenzamos la escuela secundaria porque está bamos en clases
diferentes. Yo estaba en el que tenı́a todos los coñ os gruesos y é l estaba
en la corriente superior. Ambos eran cabezas rapadas lo que nos unió .
Algunas personas a lo largo de los añ os han dicho que nuestras
personalidades se complementan, y supongo que es ası́. El es Cá ncer y
yo soy Virgo, para empezar. No es que nos hubiera importado una
mierda esas tonterı́as cuando está bamos en la escuela, pero
bá sicamente signi ica que é l es bastante seguro y relajado, mientras que
yo soy má s un loco. Cuando se trataba de meterse en problemas, yo
siempre era el instigador y é l era quien me acompañ aba. El no era un
criminal como yo. No siempre necesitaba estar robando como yo, no
tenı́a ese impulso, pero le gustaba reı́rse lo su iciente como para
acompañ arme y ver qué pasaba.
Algunos padres habrı́an visto a su hijo entablar amistad con un
alborotador como yo y trataron de ponerle una tapa, pero la mamá y el
papá de Paul no eran ası́. Nunca obtuve eso de ellos. Me llevaron a su
casa y me mostraron lo que podrı́a ser una vida hogareñ a normal. Los
Cook eran una familia amorosa: su papá , su mamá , su hermana, todos
eran buenas personas que disfrutaban de la compañ ı́a del otro. Incluso
tenı́an amigos que a veces venı́an a su casa a ver la televisió n: ası́ de
sociables eran.
Aparte de la casa de Cookie, otro lugar donde encontré un poco de
santuario fue ir a ver a los Queens Park Rangers jugar al fú tbol un
sá bado por la tarde. Me tomó cinco minutos caminar hasta su terreno en
Loftus Road. Un montó n de otros niñ os de Christopher Wren fueron y yo
hice lo mismo. Si hubiera un partido fuera de casa, a veces irı́a al Fulham
o al Chelsea, y ahora son mi equipo. Supongo que eso es algo de King's
Road.
Hubo una fase en la que era muy joven cuando veı́a el juego, pero una
vez que la cabeza rapada se hizo cargo, todo se trataba de ir al suelo
para un poco de alboroto despué s. Recuerdo algunas veces en que todos
fuimos a una tienda en Shepherd's Bush Market y robamos camisas de
Ben Sherman. Estaba orgulloso del nú mero de los que habı́a logrado
poner en mis manos por las buenas o por las malas a lo largo de los
añ os. Creo que llegué a los trece añ os, que era mucho para un niñ o de mi
edad, sin duda má s que cualquiera de mis amigos.
El zumbido de todo se trataba de sentirse parte de algo. Me gustaba
la camaraderı́a de estar con un grupo de tipos, incluso tipos que no
conocı́as pero que solo veı́as en el juego. Estaba tan acostumbrado a
estar solo que era un alivio ser parte de un grupo. Yo tambié n irı́a con
compañ eros de la escuela. Cookie, Stephen Hayes, Jimmy Macken y Alex
Hall: ese era nuestro pequeñ o equipo. Sin embargo, el lado de la
violencia no era para mı́. Podrı́a haberme engañ ado pensando que
fueron cinco minutos, pero esa no es realmente mi naturaleza. Habı́a
mucha mierda en ese momento, pero cuando solo tienes doce añ os no
está s en la primera ila y nadie realmente espera que lo esté s, se trata
má s de ser uno de los niñ os en la parte de atrá s que dice: 'Vamos ,
¡vamos a tenerlos!
No tenı́a ambiciones de ser el lı́der de ninguna irma de hooligans,
pero siempre quise vestirme como el mandamá s. Por eso estaba feliz de
ir millas fuera de la ciudad a ese lugar de la Ivy League en Richmond.
Incluso cuando tenı́a doce añ os, viajarı́a hasta los con ines de la tierra
(o icialmente, ahı́ es donde está Richmond, ¿no?) para obtener la mejor
paliza. Todavı́a harı́a eso ahora, casi cincuenta añ os despué s. Como
sugiere su nombre, Ivy League era una tienda estadounidense que
vendı́a lo que supongo llamarı́as cosas preppie: ropa como la que
usarı́an los Beach Boys, bonitas camisas a cuadros de manga corta con
Levi's Sta-Prest y los jodidos zapatos brogue adecuados. Incluso si las
ú nicas tallas de zapatos que tenı́an eran demasiado grandes para mı́,
preferı́a aguantar las ampollas en mis pies que no lucir bien.
Tenı́a toda la buena mierda. Muchos skinheads no tenı́an ni puta idea;
se pondrı́an un tatuaje viejo y horrible. Yo era un snob cuando se trataba
de ropa. Si no tenı́as las cosas adecuadas, no querı́a tener nada que ver
contigo, si usabas una camisa Brutus, o jeans que no eran Levi's, o tenı́as
patillas (aunque eso ú ltimo puede haber sido porque yo era demasiado
joven y aú n no podı́a hacerlos crecer), entonces olvı́dalo. De la misma
manera, si vieras a otro tipo con el equipo adecuado, te vincuları́as con
é l de inmediato, solo porque sabı́as que tenı́a ese algo especial.
Por supuesto que no todo el mundo es ası́. De hecho, a la gran
mayorı́a de las personas realmente no les importan una mierda estas
cosas, y cuanto má s dura cualquier tipo de movimiento juvenil, má s
tienden a involucrarse los niñ os a los que realmente no les importa. Eso
ciertamente pasó con los skinheads, y pasó de la misma manera con el
punk despué s. Al principio, se trataba de hacer un esfuerzo por lucir
distintivo y destacar, pero luego se convirtió en el uniforme de chaqueta
de cuero y jeans, sin pensar ni preocuparse má s.
Eso fue especialmente cierto cuando los estadounidenses se
involucraron. Creo que hay algo especı́ icamente inglé s en preocuparse
tanto por este tipo de detalles de la moda. Nunca he sido capaz de
precisar qué , pero creo que comenzó con los Teddy Boys y luego se
volvió aú n má s estricto con los mods y los skinheads. Y continuó en los
añ os ochenta con los informales: los hooligans del fú tbol que se vestı́an
muy bien cuando Margaret Thatcher estaba en su trono. Hay casi un
elemento extrañ o en todo el lado del pavo real: la idea de '¿quié n es la
cara?' donde tienes que vestirte y peinarte de una manera realmente
detallada y eres un capullo si no te ves tan bien. Pero al inal creo que
esta mentalidad es má s una cuestió n de clase que de sexo.
La forma en que se educó a la gente en el sistema de clases britá nico
debe haber tenido algo que ver con eso. Si pertenecı́as a la clase
trabajadora, te criaron con la sensació n de que tenı́as que conocer tu
lugar, y una forma de escapar de eso era suscribirte a un conjunto
diferente de valores que te permitı́an convertirte en parte de tu propia
aristocracia de la moda. Es por eso que los estadounidenses nunca
tendieron a entenderlo del todo cuando intentaron transferir nuestras
subculturas allá , porque no tenı́an ese condicionamiento contra el cual
empujar.
Para mı́, tener el abrigo de piel de oveja adecuado o el Crombie de
cachemir genuino era una forma de sentirme bien conmigo mismo. Era
tu cosita la que marcaba un espacio en el que podı́as tener é xito. Los
trajes bicolor eran el ejemplo perfecto de ello. No muchos de nosotros
nos dirigı́amos al tipo de trabajos en los que necesitarı́as un silbato (y
una lauta), pero podı́amos ir a un lugar llamado Stewart's en Uxbridge
Road, era un pequeñ o sastre judı́o que vio una oportunidad, y conseguir
que nos haga uno por 10 libras. Todos los niñ os que eran cabezas
rapadas de mi á rea tenı́an que pasar por ese rito de iniciació n. Ibas allı́
para medirte y é l decı́a: 'Adelante, muchacho...' Apuesto a que no podı́a
creer su suerte.
En é pocas posteriores, los skinheads llegarı́an a ser vistos como muy
estrechos de miras y racistas, pero no fue ası́ para nosotros. Despué s de
todo, lo que nos unió fue que a todos nos encantaba la mú sica jamaicana
y afroamericana. Incluso en la dé cada de 1960, Shepherd's Bush y White
City eran á reas muy mixtas: vivı́an muchos irlandeses, pero tambié n
algunos asiá ticos y un nú mero cada vez mayor de niñ os negros. Y en los
primeros dı́as no habı́a nada de esa mierda nazi. Ser un cabeza rapada
no tenı́a nada que ver con el racismo en lo que a nosotros respecta.
Habı́a un chico negro de la escuela llamado Cecil que era uno de
nuestros compañ eros y era un cabeza rapada sin que nadie dijera nada
al respecto.
Con el paso del tiempo, el 'paki-bashing' y el 'queer-bashing' se
convirtieron cada vez má s en parte de la cultura skinhead. No sé có mo
sucedió eso; Creo que tal vez el Frente Nacional se involucró y logró
torcer todo en una direcció n má s fascista. Y ese lado de las cosas se
volvió realmente distorsionado y completamente antisemita una vez que
pasó a Estados Unidos. Cuando crucé el Atlá ntico por primera vez a
inales de los setenta, el elemento nazi realmente se habı́a in iltrado,
hasta que nadie pensó realmente en bailar con las recopilaciones de
Tighten Up . Tal vez los estadounidenses sacaron todo el contexto fuera
de contexto, de la misma manera que lo hicieron con el punk.
6. LA CAPA DE INVISIBILIDAD DE STEVE
JONES
Mi carrera como heterosexual comenzó con fuerza. Cuando perdı́ mi
virginidad a la edad de trece añ os, ni siquiera me habı́a hecho una paja
antes, ası́ que mi primera eyaculació n no vino de jugar conmigo misma,
fue de follar a un pá jaro. Bueno, algo ası́ como joderla. Tenı́a mi polla
empujada entre sus piernas, pero no estoy seguro de si hubo tiempo
para entrar completamente dentro de ella antes de que disparara mi
corrida. Aú n ası́, de initivamente contaba. O al menos, lo hizo en lo que a
mı́ respecta.
El escenario de este evento ú nico en la vida fue el cobertizo donde
almacenaron el tren Flying Scotsman para el ferrocarril en miniatura del
parque de atracciones de Battersea. Tenı́a esa forma aerodiná mica
especial en la parte delantera, como el tren bala japoné s, y mi primera
pareja sexual no inexperta estaba recostada contra la curva de metal. En
retrospectiva, la elecció n de la ubicació n fue bastante divertida (dada mi
obsesió n por cortar los trenes) y ciertamente llegué a mi destino a un
ritmo rá pido.
Despué s de que sucedió , me quedé ató nita. Mi mente daba vueltas:
'¿Qué diablos fue eso?' Corrı́ a casa en el edi icio del ayuntamiento de
Battersea al que nos habı́amos mudado recientemente cuando el
nombre de mi madre inalmente llegó a la parte superior de la lista de
viviendas, corrı́ escaleras arriba al bañ o e inspeccioné mi polla en busca
de signos de dañ o. Pensé que estaba sangrando o algo ası́. Para alguien
que ya se habı́a encontrado en las situaciones que yo tenı́a, yo era
vergonzosamente inocente. Pero despué s de esa primera locura, me
encantó tanto la sensació n de correrme que no pude evitarlo. Me
masturbaba cinco veces al dı́a, con rollos de papel higié nico,
aspiradoras, todo tipo de jodidas cosas raras.
Al menos, supuse que eran raros, pero tal vez algunos de ellos
contarı́an como los experimentos pervertidos habituales que cualquier
adolescente normal harı́a. De cualquier manera, recuerdo que tenı́a esta
obsesió n por ponerme rollos de papel higié nico en la polla y
masturbarme, porque casi parecı́a que no era yo quien lo hacı́a, creo que
ese era el concepto. Estaba tan obsesionado con hacer esto que a veces
me salı́a un puto sarpullido por la aspereza del cartó n.
Supongo que todavı́a estaba tratando de descifrar la mierda, y al
menos estaba realmente dentro de algo, incluso si solo era un rollo de
papel higié nico, por lo que no fue un gran paso adelante. Un resultado de
que tu vida sexual haya tenido el tipo de comienzo jodido que tuvo la
mı́a es que, aunque está s haciendo algo que podrı́a ser bastante normal,
no siempre lo sabes, ası́ que asumes que es tan desviado e incorrecto
como todos tus otros impulsos. Por supuesto, la otra cara de la moneda
es que algunas cosas muy extrañ as pueden volverse normales con
demasiada facilidad para ti. Ciertamente lo hizo para mı́.
Lo de la eyaculació n sucedió antes de cualquier consumo signi icativo
de alcohol o drogas de mi parte (exceptuando el jadeo en un Players No.
6), y fue mi primera solució n importante. Algo que me sacó de la cabeza
por un tiempo, ası́ que no tuve que lidiar con toda la mierda que habı́a
allı́. Dada la oportunidad, todavı́a funciona ası́ para mı́ hoy, incluso ahora
he dejado todas mis otras adicciones excepto el azú car... Supongo que
nunca olvidas tus primeros amores.
Perseguir ese subidó n sexual me llevarı́a a un territorio bastante
oscuro en los pró ximos añ os. Por el momento, fue un buen trabajo.
Finalmente tenı́a mi propia habitació n, incluso si no habı́a forma de que
sus paredes de concreto me sostuvieran a mı́ y a mi libido adolescente.
No podı́a quedarme quieto ni un maldito minuto a esa edad.
El piso al que nos habı́amos mudado en Battersea estaba en una de
esas cajas realmente largas y de aspecto brutal. Se acababa de construir
y habı́an intercalado tres de estos bloques nuevos con los lugares má s
antiguos, tipo Peabody, que quedaban. Nuestro bloque bordeaba un gran
terreno baldı́o donde creo que solı́a estar una fá brica de gas, y habı́a un
callejó n de shaggers al otro lado del cual me obsesioné bastante. La
gente se detenı́a en sus autos y yo estaba del otro lado de la pared,
hacié ndome una paja mientras los veı́a follar, eso fue realmente
excitante para mı́.
Peeping Tom-ing se convirtió en una gran parte de mi vida en los
pró ximos añ os. Me avergonzaba, pero supongo que esa vergü enza era
parte de lo que me impulsaba. Ciertamente no me detuvo. Má s tarde,
todo el asunto se volverı́a aú n má s obsesivo. Encontrarı́a otro callejó n de
folladores cerca de las vı́as del tren en Battersea, y estarı́a en el puente
mirando a la gente follando en sus autos. Me enfadaba tanto que otro
tipo se metiera con el coñ o y yo no que a veces encontraba una jodida
roca grande y la golpeaba contra el capó desde arriba. ¿Te imaginas
estar en ese auto y acabar con tu vida cuando una maldita roca se
estrella contra ti? Uno pensarı́a que era el Dı́a del Juicio Final. No es que
me quedarı́a para ver el caos que causó mi obra. Yo no era tan estú pido.
Lo harı́a y vivirı́a para masturbarme otro dı́a.
No hay un estante en la biblioteca lo su icientemente alto para esta
mierda, ¿verdad? Estas son las cosas buenas que simplemente no
obtienes del chico de Nickelback (al menos, no que yo sepa).
Battersea era un lugar difı́cil para vivir en esos dı́as, pero el
departamento en sı́ estaba bien. Fue un alivio tener mi propia habitació n
por primera vez en mi vida, y estaba feliz de dejar atrá s Benbow Road y
sus malos recuerdos. La parte que má s me fastidió fue tener que viajar
desde Battersea hasta Shepherd's Bush para ir a la escuela.
No era solo que nos hubié semos mudado al sur del rı́o, me tomó
cuatro malditos autobuses llegar allı́. Lo extrañ o fue que (dado que no
estaba en la escuela) fue idea mı́a quedarme en Christopher Wren
cuando podrı́a haber ido fá cilmente a un lugar má s cercano. Mi madre
no se molestó de ninguna manera, y dudo que las autoridades de la
escuela estuvieran exactamente encantadas de retenerme: '¡Gracias,
muchachos, Steve Jones se queda!' – pero no querı́a dejar atrá s a mis
compañ eros y tener que hacer otros nuevos.
Al inal resultó que, el hecho de que ahora tenı́a que levantarme a las
siete de la mañ ana si querı́a llegar a Christopher Wren a tiempo fue
probablemente el ú ltimo clavo en el ataú d de mi carrera escolar, pero no
es como si estuviera atado por la gloria en esa direcció n de todos modos.
Lo que de initivamente hizo mudarme a Battersea fue alejarme un poco
má s del tipo de vida normal que Cookie probablemente habrı́a tenido
sin mi intervenció n. Ya me habı́a acostumbrado a ir a la ciudad por mi
cuenta en busca de cualquier tipo de travesura para distraerme de tener
que vivir con mi padrastro. Ahora tenı́a un territorio completamente
nuevo para explorar. Aquı́ es donde la capa de invisibilidad de Steve
Jones realmente comenzó a entrar en juego.
Mi arma secreta cuando salı́a a robar siempre habı́a sido
convencerme de que, dondequiera que estuviera, estaba destinado a
estar allı́ legalmente. Como en Hamleys, no estarı́a robando juegos de
trenes del piso de la tienda. Oh no, ese era un juego de tazas: me coları́a
en el almacé n. Las personas que realmente trabajaban allı́ veı́an a este
cabeza rapada de doce o trece añ os luciendo furtivo entre los juguetes
caros y hacı́an... joder absolutamente todo. Era un concepto extrañ o,
pero mientras me convencı́a de que lo que estaba haciendo era
perfectamente normal, parecı́a que la gente aceptarı́a esto por pura
fuerza de mi voluntad. No sé có mo funcionó , solo que lo hizo. Era casi
como si me hubiera hecho invisible. Como una fantası́a de tener un
superpoder, excepto que saliste del otro lado con cosas gratis reales.
La con ianza que esto me dio me llevarı́a a donde quisiera ir. Si
hubiera una puerta, caminarı́a directamente a travé s de ella. No
importaba dó nde estuviera: las tiendas má s grandes del West End o los
vestuarios destartalados de los campos de juego de St Paul's School en
Barnes, justo al otro lado del puente Hammersmith, junto al camino de
sirga donde solı́a andar en bicicletas y ciclomotores robados. abajo.
Mientras la gente normal estaba afuera jugando al fú tbol, al rugby o al
cricket, al aire libre, yo rondaba por esos vestuarios, robando sus
billeteras. Solı́a hacer eso mucho. Fue una gran distracció n de todas las
cosas en las que de otro modo tendrı́a que estar pensando.
¿Era té cnicamente un cleptó mano? Bueno, no pasaba un dı́a sin que
me despertara y pensara: '¿Qué voy a hurtar hoy?' Si sustituyes el robo
por beber o drogarse o follar, tienes una imagen bastante clara de lo que
es la adicció n. El hecho de que lo que estaba haciendo hiciera vı́ctimas
de extrañ os nunca me molestó , incluso cuando pensaba: '¿Quié n va a ser
el alma desafortunada hoy?'
Ciertamente tenı́a una sensació n de satisfacció n si llegaba a casa con
un buen botı́n, pero aun ası́ volverı́a a hacerlo al dı́a siguiente. Mi robo
no fue impulsado por un objetivo; no se trataba de juntar su iciente
dinero para hacer algo en particular, se trataba de la emoció n por sı́
misma, de ver con qué podı́a salirme con la mı́a. Bueno, eso y tener algo
en lo que pudiera concentrarme me distraerı́a de mı́ mismo. Ademá s, era
algo en lo que era bueno. Robé por amor, te lo digo.
La capa de invisibilidad no solo era ú til para raspar cosas: era una
prenda multiusos. Tambié n me lo ponı́a para colarme en la central
elé ctrica de Battersea. Pink Floyd aú n no habı́a hecho Animals , pero no
necesitabas un cerdo volador para mostrarte có mo esas malditas
chimeneas enormes dominaban el paisaje alrededor de mi nuevo hogar.
Tenı́a que encontrar una manera de entrar, lo cual no era difı́cil, y una
vez que estaba allı́, era fá cil encontrar escaleras y otros pequeñ os
cubı́culos en los que podı́a escabullirme y esconderme si alguno de los
viejos que trabajaban allı́ sospechaba. Cosa que nunca hicieron,
obviamente, porque yo tenı́a puesta la Capa.
Ese lugar era enorme por dentro. Habı́a una sala abierta gigante con
estas jodidas turbinas enormes, una para cada una de las chimeneas, en
las que podı́as verlas funcionando incluso de noche. En realidad, no
tenı́as que andar de puntillas, porque allı́ dentro habı́a tanto ruido que
nadie podı́a oı́rse pensar. El calor del carbó n encendido ciertamente lo
mantuvo lo su icientemente caliente, pero pronto descubrı́ una manera
de subir a la parte superior del edi icio para poder salir al techo. Fue
fantá stico allá arriba, las vistas a lo largo del rı́o eran increı́bles. Añ os
má s tarde, cuando salió esa pelı́cula Brasil , con todas las escenas
ilmadas dentro de las centrales elé ctricas, todo me resultó muy familiar:
sabı́a que habı́a estado allı́ antes.
Una vez que estabas en el techo, las cuatro chimeneas gigantes tenı́an
pequeñ as escaleras por las que podı́as subir. Subı́ la mayor parte del
camino, pero no todo el camino porque lo embotellé . Era muy á gil
cuando era joven, era uno de mis muchos dones, y no tenı́a miedo a las
alturas, pero les digo que allı́ arriba daba miedo. Alguien me dijo que el
libro de Glen Matlock tiene una descripció n dramá tica de có mo la policı́a
me persiguió hasta lo alto de una de las chimeneas, pero no recuerdo
que eso haya sucedido realmente (¿qué iba a hacer cuando me
atraparan? – ¿saltar?), ası́ que tal vez embellecı́ un poco la historia. O
eso, o Glen confundió mi vida real con el inal de una pelı́cula.
Habı́a una verdadera emoció n en el aire frı́o de la noche golpeando tu
cara cuando saliste de la sala del horno gigante y subiste al techo. Es una
maldita vergü enza que a algunos desarrolladores idiotas se les haya
permitido arrancarle las entrañ as a ese lugar para ganar dinero rá pido.
Esas chimeneas son lo ú nico que alguien recuerda de esa parte de
Londres. Bueno, eso y la casa de los perros.
La vista desde lo alto de la central elé ctrica no era la ú nica emoció n
que Battersea tenı́a para ofrecer. Como mencioné al comienzo de este
capı́tulo, tambié n sucedieron cosas maravillosas en el recinto ferial de
Battersea Park. Me encantaba ir allı́, y tuve otro de esos momentos
musicales emblemá ticos, epifanı́as, supongo que los llamarı́as, junto al
vals, donde el Fairground Ted se para en la parte de atrá s para
impresionar a las chicas y tratar de sacar dinero de bolsillos de la gente.
Estaban tocando las canciones de é xito del dı́a y sonó '(Sittin' on) The
Dock of the Bay' de Otis Redding. Era el mismo MO bá sico que con
'Purple Haze'. ¡Auge! La canció n no solo se te queda grabada en la
cabeza, sino que recon igura tu cerebro.
Debo haberme quedado allı́ durante dos horas completas, con la
esperanza de escucharla de nuevo, pero obviamente no iban a tocar la
misma canció n dos veces. Finalmente llegaron a las nueve de la noche, la
feria se cerró y me fui a casa con 'Dock of the Bay' todavı́a resonando en
el viejo noggin. Tal vez sea el silbido. Ahora hago algo en mi programa de
radio, Jonesy's Jukebox , donde silbo una canció n sobre los acordes de la
guitarra y la gente tiene que adivinar qué es: los vuelve locos cuando no
pueden entenderlo. Ası́ que supongo que Battersea Funfair podrı́a ser el
punto de partida, pero es má s probable que fuera algo de la canció n en
su conjunto que resonara en mı́ cuando era un niñ o de trece añ os.
No sé por qué estaba tan desesperado por escucharlo de nuevo.
Supongo que podrı́as mirar la letra y decir: 'Bueno, es alguien atrapado
en algú n lugar cerca del agua que está tratando de imaginar una vida
mejor', pero como dije antes, nunca escuché realmente la letra de las
canciones, aunque tal vez los he asimilado sin realmente darme cuenta.
Odio admitirlo porque me hace sonar como un jodido idiota, pero es
verdad: la melodı́a y el ambiente general eran lo que me importaba má s
que cualquier otra cosa. Pensar en la letra me habrı́a recordado a la
escuela. Por supuesto, las cosas pueden arraigarse en tu mente de una
manera que no entiendes, pero sin embargo esa canció n me habló , no
fue a travé s de mı́ pensando en lo que estaba cantando Otis Redding.
Una cosa de la que me di cuenta cuando era niñ o es que nunca hacı́a
preguntas como lo hacı́an otros niñ os. Creo que me habrı́a sentido como
si estuviera molestando a alguien, ası́ que en lugar de simplemente
preguntar '¿Por qué ?' si habı́a algo que no entendı́a, simplemente lo
dejaba pasar y lo pasaba por alto. No era que no tuviera curiosidad o que
no me diera cuenta de lo que estaba pasando a mi alrededor, pero si
estaba confundido acerca de algo que nunca esperé , alguien querrı́a
ayudarme.
Cuando creces como yo lo hice, con el mundo e incluso tu propia
familia dá ndote constantemente el mensaje de que eres un pedazo de
mierda que nunca llegará a nada, es difı́cil no empezar a creer eso tú
mismo. No era que mi mamá y mi padrastro me estuvieran diciendo
directamente: 'No eres nada, nunca llegará s a ninguna parte' todo el
tiempo, aunque una vez que comencé a tener problemas con la policı́a,
escuchaba ese tipo de cosas. má s y má s; era solo un sentimiento general
de no ser apoyado.
La triste realidad de mi capa de invisibilidad era que tenı́a dos caras.
El comienzo de esto simplemente estaba siendo ignorado. Luego tomé
esa dolorosa realidad de no sentirme querido en mi propia casa y le di la
vuelta: 'Bueno, si nadie se va a dar cuenta de mı́, tal vez eso signi ique
que puedo deambular por lugares y robar cosas'. Al menos ası́ sacaré
algo de provecho. Era casi como si el hecho de no sentir que tenı́a
derecho a pertenecer a ningú n lugar me diera el impulso de ir a todas
partes. Algunas de estas cuestiones eran demasiado dolorosas como
para pensar en ellas, y mientras me movı́a de una escena del crimen a la
siguiente, sabı́a que podı́a ignorarlas. La Capa podrı́a protegerme.
No se me ocurrió en ese momento, pero creo que tambié n habı́a dos
lados en la forma en que mis compañ eros me veı́an. Por un lado, yo era
el elegido –Jimmy Macken solı́a decir que 'podrı́a caerme en mierda de
vaca y salir oliendo a rosas'. Por otro lado, a pesar de que esto, y
especialmente no la cosa con mi padrastro, no era algo de lo que
hubié ramos hablado alguna vez, deben haberse dado cuenta de que las
cosas no estaban bien en casa. No es algo que realmente quieras que
otras personas sepan, ¿verdad? Quieres que todos piensen que vienes de
una familia normal para que no tengas que ser el extrañ o . Pero, ¿por
qué si no querı́a quedarme siempre en Cookie's o Hayesy's o Jimmy
Macken's?
Yo era ese niñ o que nunca dejó de querer pasar el rato y quedarse a
dormir. Probablemente era un dolor en el culo, pero creo que los padres
de mis amigos deben haber sentido lá stima por mı́, porque no recuerdo
que ninguno de ellos me haya hecho saber que estaba por encima de los
requisitos. Podı́an ver que yo era un problema, pero hicieron todo lo
posible para cuidarme de todos modos. Supongo que algunas personas
son ası́ de cá lidas.

Á
7. MÁQUINA DE PLATA
Nuestro pró ximo movimiento musical despué s de ser skinheads no fue
obvio en el papel. Normalmente se necesitan unos pocos pasos para ir
de Ska a Sabbath, pero lo hicimos de un solo salto. Como cualquiera que
escuche mi programa de radio le dirá , todavı́a me encanta dar un salto
de fe cuando se trata de gé neros musicales, y este se sintió bastante
ló gico en ese momento. Cuando el hermano mayor de Stephen Hayes
nos puso Black Sabbath y Led Zep II con 'Whole Lotta Love' por primera
vez, nos enganchamos al instante.
El verdadero nombre del hermano de Stephen era Tony, aunque lo
llamá bamos Dick para ponerlo nervioso, y la familia Hayes vivı́a en la
inca de White City. Era un lugar difı́cil, donde la mayorı́a de los chicos
geniales de Christopher Wren solı́an vivir. Todas las calles parecı́an tener
nombres sudafricanos, lo que en ese momento pensé que era por ser
White City, pero resulta que tiene algo que ver con las exhibiciones que
solı́an tener en el sitio antes de que se construyera el estadio.
Tengo un recuerdo muy claro de estar sentado en una cama en la casa
de los Hayes escuchando 'Dow dow... dow, dow dowwww'. Estoy seguro
de que ya has adivinado qué canció n es, cualquier tonto podrı́a
reconocer que es 'Sweet Leaf' de Black Sabbath. Todavı́a no habı́a cogido
una guitarra con ira, pero si alguna canció n va a hacer que te apetezca
intentarlo tú mismo, es esa. Lo gracioso es que é ramos muy inocentes y
no sabı́amos que la letra era sobre marihuana. A menos, por supuesto,
que me haya equivocado y que 'Sweet Leaf' sea en realidad una canció n
sobre la llegada del otoñ o...
No es que las drogas nos fueran desconocidas en ese momento. Tenı́a
solo catorce añ os la primera vez que tomé un Mandrax. Lo hice fuera de
un juego QPR, era solo una pequeñ a tableta blanca que estaba destinada
a ser una pastilla para dormir, como una aspirina, excepto que tal vez un
poco má s gorda, y ademá s de un par de pintas me hizo caer por todos
lados en alrededor de la una o dos de la tarde. Recuerdo que los chicos
mayores se reı́an de mı́ y yo pensaba que la sensació n de hormigueo que
me daba Mandy eran las tetas. Debe haber sido bastante fá cil de
conseguir en ese momento, porque logré conseguir uno y no conocı́a a
nadie.
Tambié n tomé LSD un par de veces, pero lo odiaba. Una vez estaba en
la casa de un amigo, que estaba justo en Westway. El á cido es un poco
como ese camino: una vez que está s en é l, no puedes parar y no tienes
mucho control sobre por dó nde sales. Su mamá y su papá estaban en
una habitació n, sin tener idea de lo que está bamos haciendo, y nosotros
dos está bamos en otra. Cuando me levanté para ir a mear en un
momento me miré en el espejo y todo lo que vi fue este esqueleto negro.
¡A la mierda eso por un juego de soldados! Creo que no pude dormir
hasta que salió el sol; parecı́a que la noche nunca iba a terminar.
Entiendo que el LSD es bueno para la cabeza de algunas personas,
pero no funcionó para la mı́a. Weed era un poco similar, simplemente me
ponı́a demasiado paranoico y enloquecı́a. Algunas personas encuentran
que les ayuda a relajarse, pero no puedo disfrutarlo, tal vez soy
demasiado controlador.
Un impulso que no tuve oportunidad de controlar fue mi adicció n a
correrme. Con ese in, mis actividades como miró n probablemente
alcanzaron su punto má ximo entre los catorce y los quince añ os. Si
alguna vez te preguntaste quié n estaba haciendo pequeñ os agujeros en
la pared de los bañ os pú blicos a ines de la dé cada de 1960 y principios
de la de 1970, bueno, ese habrı́a sido yo. (No solo yo, obviamente, pero
si West London hubiera organizado un campeonato regional,
de initivamente habrı́a sido cabeza de serie, en má s de un sentido).
Solı́a esperar y observar a un pá jaro para entrar en uno y luego
entrar en la puerta de al lado y mirar por el agujero. Parte de la emoció n
era saber lo mal que estaba: la emoció n y la vergü enza de colarme en el
bañ o, simplemente con ganas de volverme loco porque sabı́a que la
grati icació n instantá nea era la forma má s rá pida de sentirse bien... La
gente normal no está haciendo eso. tipo de cosas todas las noches,
¿verdad? Era como si me hubiera convertido en el nonce local, solo que
en una forma diferente. Este era el mundo al que habı́a sido arrastrado.
Esa mierda era como un virus.
Me pillaron cuando estaba espiando a Tom una vez. Estaba mirando a
travé s de la ventana de este bloque de pisos donde vivı́an algunos ricos
en Hammersmith y alguien debe haberme visto y llamó al Old Bill. La
policı́a me atrapó y me dijo: '¿Qué está s haciendo?' Al principio
respondı́: 'Nada', pero no estaban teniendo eso.
Estaba demasiado avergonzado por el hecho de que estaba tratando
de tener un pedal para decirles la verdad, ası́ que ingı́ que estaba
planeando un allanamiento. Eso resultó ser un movimiento bastante
bueno, ya que en realidad no habı́a entrado allı́, no podı́an hacerlo. Pero
no me salı́ tan bien la vez que un par de porteros del Hammersmith
Palais me sorprendieron en el techo asomá ndose a los bañ os de mujeres.
Me colgaron del borde del techo por mis jodidos tobillos y amenazaron
con dejarme caer.
Nadie los habrı́a culpado realmente si lo hubieran hecho. Como
puedes imaginar, ser el niñ o en esa foto en particular no fue una buena
sensació n. Fue un momento de mi vida, y no el ú ltimo tampoco, en el
que escuchar mú sica era lo má s cerca que podı́a estar de hacer que las
cosas se sintieran bien. Me conseguı́ un esté reo decente con las
ganancias de mis robos y solı́a comprar algunos discos raros para tocar
en é l. Recuerdo esta banda The Groundhogs que tenı́a una gran canció n
llamada 'Cherry Red'. No sabı́a nada de ellos, solo vi la portada de su
á lbum Split en una tienda de discos en King's Road y me gustó có mo se
veı́a.
Alguien má s en ese mismo tipo de á rea de blues que no recibe mucho
amor en estos dı́as es Paul Kossoff, el guitarrista de Free. Me encantaba
ese sonido plano que tenı́an. Sus canciones tenı́an un pavoneo real sobre
ellos, pero tambié n una elegancia. Todavı́a podı́as escuchar las
in luencias negras allı́, pero estaban haciendo lo suyo con ellas. Este era
el tipo de mú sica que escuchaba en esa habitació n de Battersea cuando
salı́a de la escuela y mi mamá y mi padrastro estaban en el trabajo. Me
sentaba allı́ sintié ndome solo y mirando por la ventana la enorme
extensió n de terreno baldı́o.
Covent Garden Market se ha trasladado allı́ ahora, pero en esos dı́as
era solo un gran espacio vacı́o con un depó sito de Securicor en la
distancia. El vacı́o donde solı́a estar la antigua fá brica de gas era un lugar
de oportunidades, y no solo para los mirones. Tambié n habı́a un gran
almacé n de Carlsberg al otro lado, donde podı́a colarme, subir hasta la
parte superior y sentarme en cajas gigantes de cerveza especial para
emborracharme solo. Desviaciones sexuales, alcohó licos en formació n:
este lugar tenı́a algo para todos. Todo lo que se necesitaba era una
escuela de manejo gratuita al aire libre para los jó venes conductores de
placer...
En el transcurso de las largas horas que pasé mirando por la ventana,
comencé a notar cuá ntos vehı́culos grandes de movimiento de tierras
quedaban tirados en el pá ramo: volquetes, camiones, excavadoras, etc.
Lo raro de ellos era que no parecı́an ser responsabilidad de nadie; nadie
los estaba cuidando e incluso a plena luz del dı́a nunca vi ningú n cuerpo
allı́. Serı́a de mala educació n no aprovechar al má ximo este tipo de
oportunidad. Aparte de que mi abuelo me dejó sostener el volante de su
Austin A40 cuando era niñ o, nunca habı́a estado cerca de conducir nada,
pero ahora aquı́ estaba a los catorce añ os, maniobrando estos enormes
camiones de mierda alrededor del basurero.
Es una excelente manera de aprender a conducir, pedir prestado un
camió n grande y se lo recomendarı́a a cualquiera. Era fá cil entrar en
ellos: nunca estaban cerrados y podı́as encenderlos con el mango de un
peine. Fui bastante sistemá tico en enseñ arme a mı́ mismo a conducir,
aprender a cambiar de marcha y usar la marcha atrá s. Resultó que
cuando habı́a algo que realmente querı́a aprender, podı́a aplicarme
despué s de todo. Me vino de forma natural. Nadie me enseñ ó , lo
descubrı́ por mı́ mismo.
Añ os despué s descubrı́ que mi verdadero padre trabajó durante
muchos añ os como camionero, ası́ que tal vez hubo un elemento
gené tico. Mientras tanto, fue una buena sensació n aprenderlo tan
rá pido. Debo haber lucido jodidamente ridı́culo, un niñ o de catorce añ os
al volante de una excavadora gigante, pero nadie me detuvo. Por
supuesto que tenı́a mi Capa puesta, pero a veces un compañ ero llamado
Alex Hall se unı́a a mı́ y no tenı́a una, ası́ que joder sabe có mo se salió
con la suya.
No me volvı́ loco al principio. Yo estaba má s interesado en averiguar
todo el asunto. Pero a medida que pasaba el tiempo, me volvı́ má s
ambicioso: pasé de los camiones de carga trasera que llenan de tierra a
excavadoras y excavadoras. Y una vez que obtuve los conceptos bá sicos
de conducció n, pudimos comenzar a divertirnos mucho, derribando
cabañ as de té de madera y, en general, teniendo un motı́n. Solo la simple
acció n de romper cosas me hizo sentir muchı́simo mejor. Nunca se
pensó en las consecuencias en la ecuació n: está bamos demasiado
ocupados divirtié ndonos.
Tuve la suerte de ser joven en la é poca dorada de los delitos
automovilı́sticos. Si hubiera alcanzado la mayorı́a de edad en la era de
las cá maras de seguridad, probablemente todavı́a estarı́a atrapado en la
prisió n de Brixton ahora. Tal como estaban las cosas, no habı́a cá maras,
ni alarmas, ni interbloqueos, y podı́as robar casi cualquier cosa sobre
ruedas. Una vez que averigü é có mo conducir en las obras de
construcció n, podrı́a llevar mis habilidades de conducció n divertida al
resto del mundo. Los minis eran los má s fá ciles de entrar debido a las
dos pequeñ as ventanas. Los motores má s elegantes tendı́an a ser má s
difı́ciles porque tenı́an un poco má s de actividad, en lo que respecta a
dó nde irı́a la llave. Conseguimos un Jaguar una vez, pero no hasta un
poco má s tarde, ası́ que tal vez guarde esa historia.
Durante todo el tiempo que transcurrieron mis primeras aventuras
en el robo de autos no tan grande, mis compañ eros todavı́a estaban en
Christopher Wren. A veces viajaba para reunirme con ellos fuera de las
puertas de la escuela despué s de un duro dı́a de descanso, y una vez fui
allı́ en un automó vil mellado y estaba haciendo el tonto arriba y abajo
del camino para impresionar a todos cuando se estrelló directamente
contra otro automó vil en el que esta mujer conducı́a a su hijo a casa.
Afortunadamente, nadie resultó herido, pero estaba justo afuera de la
escuela y prá cticamente fue una colisió n frontal. Todos me vieron. Me
lancé , pensando: 'Maldita sea, ahora estoy en problemas'. Y deberı́a
haberme metido en problemas, pero no lo hice. El golpe en la puerta de
mi madre nunca llegó . No sé por qué , tal vez el otro auto tambié n fue
robado.
Dado el alcance de mis actividades delictivas en ese momento, era
inevitable que usara un agujero en mi capa de invisibilidad, pero nunca
esperé que lo que inalmente me robarı́an serı́a robar una Lambretta. Lo
tuve durante tanto tiempo que sentı́ que era mı́o, y le quité los paneles
laterales y el frente para convertirlo en un "esqueleto", esencialmente
solo dos ruedas y un motor, que es lo que todo los ladrones de scooters
conscientes de la moda estaban haciendo en el oeste de Londres a
principios de los añ os setenta. Estaba dando vueltas por Battersea Park
cuando la policı́a me detuvo y terminé siendo enviado a una 'escuela
aprobada' llamada Banstead Hall.
Si estuviera haciendo una pelı́cula de informació n pú blica para
delincuentes adolescentes, como la vieja de Alvin Stardust para Green
Cross Code, mi consejo serı́a: 'Entonces, todos ustedes, niñ os pequeñ os,
no conviertan sus scooters robados en esqueletos porque obtendrá n
mellado.' Pero que me enviaran a Banstead Hall no me fue tan mal. Era
un hermoso edi icio victoriano antiguo en Surrey, justo en el campo, y en
realidad me gustaba mucho má s que estar en casa.
Las escuelas aprobadas estaban un paso por debajo de los
reformatorios. Eran lugares a los que enviaban a niñ os que todavı́a
pensaban que tenı́an alguna posibilidad de salir adelante, y Banstead
Hall se dirigı́a de una manera bastante decente. No é ramos muchos allı́,
probablemente veinte niñ os como má ximo, y dormı́as en habitaciones
grandes que tenı́an cuatro camas en cada una. El personal estaba bien.
Sabı́an que é ramos niñ os descarriados, pero se sentı́a má s como si nos
estuvieran dando otra oportunidad. No era como un nick apropiado
donde simplemente te tratarı́an como una mierda.
Esta fue la primera vez que estuve en el campo por má s de un dı́a de
viaje, y me tomó un tiempo adaptarme a no vivir en un gran bloque de
pisos con todo tipo de otras tonterı́as todo el tiempo. Sin embargo, una
vez que me acostumbré , comencé a disfrutar mucho. No eran
exactamente los Cinco Famosos, tal vez má s como cuando los niñ os de
Londres fueron evacuados en la guerra. Despué s de estar allı́ un tiempo,
te ponı́an a trabajar en los jardines. Esa fue una experiencia hermosa
para tener cuando era niñ o: estar al aire libre, rodeado de naturaleza.
De initivamente sembró una semilla, y es por eso que en estos dı́as
siempre insisto en querer mudarme de Los Angeles y mudarme al norte
de California.
Me gustaba tanto estar en Banstead Hall que cuando llegó el
momento en que nos dejaban ir a casa los ines de semana, no siempre
quise hacerlo. Casi todos los demá s estarı́an fuera excepto yo y tal vez un
par de niñ os má s con vidas hogareñ as jodidas. Decidimos que
preferı́amos quedarnos donde está bamos. Estar en el campo nos dio una
especie de consuelo; el ú nico inconveniente era que no habı́a nada que
cortar.
Por supuesto, no tenı́a ningú n interé s en dejar el robo, y ahı́ fue
donde se derrumbó todo el proceso de rehabilitació n. De hecho, una de
las cosas divertidas de estar allı́ fue que las veces que iba a Londres a
pasar el in de semana, a menudo terminaba robando un motor para
conducir de regreso a Surrey un domingo por la noche. Esto fue antes de
la licencia computarizada y todos sabı́an lo que estaba robado y lo que
no, por lo que nunca sentı́ que me iban a hacer nada.
Uno pensarı́a que alguien podrı́a haber cronometrado todos los autos
robados estacionados en el campo en la parte de atrá s despué s de un
tiempo, pero nunca lo hicieron. Y no puedo molestarlos demasiado por
ser poco observadores, ya que de alguna manera me las arreglé para no
darme cuenta de que el objetivo de estar en Banstead Hall era dejar de
robar. Simplemente no conecté esos puntos en absoluto. La forma en que
vivı́ mi vida en ese entonces, y durante unos buenos añ os despué s, fue
que estaba en un lugar, y lo que sucedió fue solo otra experiencia. Esa
actitud se convertirı́a en una gran parte de lo que era el punk (o al
menos estaba destinado a ser) pero me metió en un montó n de
problemas.
Una de las mejores cosas de la vida en Banstead Hall era poder ver
Top of the Pops un jueves por la noche. Estaba sentado frente a ese
televisor escolar aprobado cuando tuvieron lugar dos de los eventos má s
importantes en mi educació n musical. El primero, en junio de 1972
(de initivamente correcto, porque lo busqué en YouTube), fue 'Silver
Machine' de Hawkwind. Obviamente, no sabı́a entonces que terminarı́a
comprá ndole speed a Lemmy en Notting Hill unos añ os despué s, o que
serı́amos amigos durante añ os en Los Angeles. Lo que sı́ sabı́a era que
me encantaba esa canció n. Si habı́a una banda sonora para mis hazañ as
de robo de autos, excavadoras y ciclomotores, 'Silver Machine' lo era.
Dos meses despué s (gracias, YouTube), una bomba musical aú n má s
grande estalló en mi cerebro: 'Virginia Plain' de Roxy Music. Fue la
forma en que se veı́an combinados con el sonido lo que realmente hizo
el dañ o con este. Por supuesto, solo lo viste una vez, porque todavı́a no
habı́a grabadoras de video con botones de pausa y rebobinado, pero eso
hizo que el recuerdo fuera aú n má s especial. Brian Eno parecı́a venir del
espacio exterior con sus plumas verdes, y Bryan Ferry estaba tan dandi
que se convertirı́a en una igura de fantası́a para mı́ en los añ os
venideros.
Era como James Brown y el prı́ncipe Carlos en uno, y solı́a imaginarlo
viviendo en un á tico en Knightsbridge y pensaba cuá nto deseaba ese
tipo de existencia glamorosa. Mi madre tenı́a un trabajo de medio
tiempo lavando el cabello de la gente en Knightsbridge en ese momento,
y eso parecı́a lo má s cerca que iba a llegar a la jet set internacional.
Aunque todavı́a no habı́a cogido una guitarra y no tenı́a ningú n
conocimiento té cnico de mú sica, ya tenı́a un sentido muy claro de lo que
era bueno y lo que era una mierda. Era lo mismo que con la ropa,
conociendo la diferencia entre Levi's y Brutus. Por ejemplo, a pesar de
que Sweet y Gary Glitter y todos los demá s estaban bajo el mismo
paraguas de 'glam rock' que Roxy Music, sabı́a que la suya era mú sica de
mierda diseñ ada para adolescentes que no tenı́an cerebro, mientras que
Roxy Music tenı́a intelecto y profundidad para ellos y, en general, eran
má s elegantes.
Bueno, Ferry, Andy Mackay y Brian Eno lo fueron. Phil Manzanera era
un buen guitarrista, pero no se fue del todo con la imagen, eso es seguro.
Parecı́a má s como un viejo progresista que estaba tratando de seguir el
viaje, todavı́a tenı́a barba y toda esa mierda. Está bien, hizo un esfuerzo
por encajar en algo un poco má s vanguardista, pero se notaba que en
realidad no querı́a.
Me encantaron esos dos primeros á lbumes de Roxy Music cuando
salieron: el homó nimo y For Your Pleasure . Todavı́a los amo ahora. El
tercer y cuarto á lbum tambié n son geniales, pero fueron los dos
primeros los que cambiaron todo para mı́. Tengo la introducció n de
'Beauty Queen' como tono de llamada de mi mó vil incluso ahora.
No sé por qué , tal vez porque parecı́a el má s accesible de los tres, y
tambié n era muy extrañ o y estaba haciendo sus jodidas cositas, pero
Andy Mackay era al que terminarı́a aferrá ndome. Unos meses má s tarde
(y solo pasaron nueve meses entre el primer y el segundo á lbum, que
me jodan, no andaban por ahı́ en esos dı́as, ¿verdad? Ese Chris Thomas
debe haber sido un verdadero esclavista), Me compré un par de esas
enredaderas de burdel con brillantina por todas partes que puedes verlo
usando con un traje de caldera en la portada de For Your Pleasure.
Andy Mackay incluso inspiró un poco de un experimento capilar
cuando teñ ı́ la parte frontal de mi cabello con lejı́a domé stica en su
honor. Desafortunadamente, tengo ese maldito pelo grueso que no se
ajusta a lo que quieras hacer con é l. Este barnet imposible de entrenar
me causarı́a muchos problemas en los pró ximos añ os. Es probablemente
lo que má s me ha decepcionado de mı́ mismo.
El intento fallido de decolorar la parte frontal de mi cabello para
parecerse al de Andy Mackay no fue el ú nico experimento atrevido y
glamoroso de mi era en Banstead Hall. Una vez, cuando este otro chico y
yo ı́bamos a tomar el tren de regreso a Londres el in de semana, hice
que me la chupara en uno de los compartimientos de tren cerrados en
los que solı́an pasar todo tipo de mierda, y luego le di 50p por su
problema. Sé lo que está s pensando, 'el ú ltimo de los grandes
gastadores', pero 50 peniques era mucho dinero en ese entonces.
Podrı́as comprar uno solo con eso.
Dada la naturaleza exclusiva de hombres de mis iniciaciones
sexuales, era extrañ o que cuando era niñ o nunca me preocupara que
pudiera ser gay, pero desde una edad temprana siempre tuve mucha
con ianza en mi sexualidad. Sabı́a que amaba a los pá jaros y, como regla
general, no querı́a tener nada que ver con los viejos. No lo digo por
vergü enza. Si me hubieran gustado los geezers, eso habrı́a sido otra
cosa. Pero mi mamada de Banstead fue la primera de un puñ ado, si esa
es la palabra correcta, y a veces lo serı́a, de excepciones que probaron
esta regla en los añ os venideros.
En la raı́z de toda mi mierda a lo largo de los añ os ha sido lo mismo:
la soledad y el deseo de sentirme bien en mi cuerpo, que a esa edad
nunca parecı́a poder manejar a menos que estuviera actuando de alguna
manera. En ese contexto, no parece que el hecho de que, en ausencia de
una compañ ı́a femenina, ocasionalmente estuviera dispuesta a ampliar
un poco mi á rea de in luencia fuera realmente tan importante. No puedo
saber có mo me afectó el abuso infantil. No tengo ni puta idea de si estas
cosas hubieran sucedido sin é l, pero al inal del dı́a, ¿realmente importa?
Obviamente, no todo el mundo siente lo mismo y, de alguna manera,
habrı́a sido má s fá cil para mı́ mantenerme en silencio sobre la pequeñ a
porció n de mi abultado catá logo de experiencia sexual que era lo que
té cnicamente se conoce como 'geezer-on-geezer'. La razó n por la que
pensé que era importante 'ir allı́' en este libro fue que muchos chicos, y
probablemente chicas, tienen un momento extrañ o ocasional y terminan
castigá ndose por eso durante añ os.
Algunas personas se llevará n sus sentimientos de culpa y ansiedad a
la tumba, y la otra cosa es que cuando ves a un chico gay siendo
golpeado en una pelı́cula, puedes estar 90 por ciento seguro de que el
chico que lo está haciendo será gay ellos mismos, o al menos inseguros
de su sexualidad. Las personas a menudo atacan a los demá s por algo
que les preocupa. Nunca fui de esa manera, porque nunca ha sido un
gran problema para mı́. No estoy diciendo que contarlo todo vaya a
cambiar la vida de alguien: 'Oh, Steve lo admitió y ahora me siento bien
con lo que hice'. Realmente no me importa lo que hagan los demá s, pero
creo que el mundo probablemente serı́a un lugar mejor si la gente se
sintiera menos avergonzada por estas cosas.
8. EN ROD CONFIAMOS
Despué s de estar en Banstead Hall unos meses, empezaron a tratar de
introducirnos en el mundo del trabajo. ¿Sabes cuá ndo tienes que
conocer a alguien y tardas exactamente diez segundos en darte cuenta
de que lo vas a odiar? Bueno, ası́ era má s o menos como era conmigo y el
empleo remunerado normal. Nunca pensé que era algo que estaba
destinado a hacer, y mis primeras experiencias en el mercado laboral no
hicieron que cambiara de opinió n.
El primer trabajo al que me enviaron en el á rea local fue como
ayudante de plomero en un hospital infantil. Era uno de esos lugares
donde todos los niñ os tenı́an cabezas enormes; encefalitis, creo que ası́
lo llaman. Llevaba las herramientas de este viejo a travé s de salas llenas
de niñ os que parecı́an extraterrestres y me asusté un poco. Tenı́a que
haber formas má s fá ciles de ganar dinero, y ya conocı́a varias. Lo que
necesitaba era alguien con antecedentes similares a los mı́os a quien
admirar como modelo a seguir. Afortunadamente, ya tenı́a una
in luencia estabilizadora que podrı́a ayudarme a darme un conjunto
apropiado de aspiraciones para un niñ o de clase trabajadora hecho
realidad. Ese hombre era Rod Stewart.
En Gran Bretañ a en ese momento no habı́a muchos ejemplos de
personas como yo a quienes las cosas les habı́an funcionado. Sin
embargo, Rod ciertamente cumplió con los requisitos. Era un tipo
normal cuyo destino cayó en su lugar solo porque tenı́a el cabello, la voz
ronca y las piernas largas. Solı́a pensar que las estrellas de rock caı́an del
cielo. En la vida real, probablemente bajaron del escenario en Top of the
Pops , se quitaron el equipo y se fueron a casa a ver la televisió n como
todos los demá s, pero en lo que a mı́ respecta, vivı́an en Marte y vinieron
en una nave espacial para actuar para nosotros. No pensé que fuera
posible que alguien como yo se convirtiera en uno. Pero vi un poco de mı́
en Rod (no, no ese poco) y sentı́ que lo cuidé desde el principio.
Nunca fui uno de los niñ os que lo preferı́an si la mú sica que les
gustaba no tenı́a é xito. Querı́a que todas mis canciones favoritas llegaran
a lo má s alto de las listas para mostrarles a todos lo jodidamente buenas
que eran. Recuerdo ir a HMV en Oxford Street para comprar el á lbum de
Rod de 1971 Every Picture Tells a Story tan pronto como salió , antes de
que nadie supiera lo grande que iba a ser. Estaba tan orgulloso de mı́
mismo despué s cuando llegó al nú mero uno en Gran Bretañ a y Estados
Unidos al mismo tiempo. Recuerdo haber pensado: '¡Lo sabı́a! ¡Joder, te
lo mostré !
Ya estaba convencido de que Rod era una estrella porque su á lbum
anterior, Gasoline Alley , era jodidamente bueno, era casi como si
trabajara para é l. Me encantaron First Step y Long Player , los dos
á lbumes de Faces que salieron a ambos lados tambié n. Creo que hubo
una complicació n legal que signi icó que bá sicamente los Faces tambié n
tocan en los discos en solitario de Rod, aunque Micky Waller está en un
montó n de pistas de baterı́a. Sé que The Faces se cabrearon con eso al
inal, pero lo mejor de todo el arreglo desde mi punto de vista fue que
tenı́as el doble de á lbumes para escuchar. Si cuentas el tercer LP de
Faces, A Nod Is As Good As a Wink... hasta el siguiente disco en solitario
de Blind Horse y Rod, Never a Dull Moment , que ciertamente hice, ya
que eran igual de buenos, son cinco á lbumes brillantes que lanzó Rod. en
el espacio de unos dos añ os.
Aunque habı́a muchas cosas en las que me costaba concentrarme,
estaba muy atento a la mú sica que me gustaba. Lo escuchaba una y otra
vez hasta que volvı́a loca a la gente, y si no hubiera nadie má s cerca, no
me avergü enza decir (bueno, tal vez un poco) que el adolescente
solitario Steve podrı́a incluso ser encontrado imitando a 'Maggie May'. '
en el espejo, perfeccionando la vieja té cnica del micró fono de cepillo
para el cabello. No es que me gustara particularmente la idea de mı́
mismo como cantante, pero realmente no puedes imitar la guitarra o la
baterı́a en el espejo o parecerá s una herramienta completa.
El aspecto de las cosas siempre signi icó tanto para mı́ como el
sonido. Me encantaba mirar la portada de Never a Dull Moment y luego
abrir la carpeta para ver todas las fotos de lo que llevaba puesto. Tengo
que felicitar a Rod por lo obsesionado que estaba con é l cuando era
adolescente, especialmente como punta de lanza de los Faces, pero el
par de veces que lo vi en Los Angeles en los ú ltimos añ os realmente no
querı́a dejarlo. en. Sin embargo, sabı́a que tenı́a una idea cuando su hija
le pidió que me irmara una foto, porque la irmó "Para Steve Jones,
tienes una gran perilla". Tiene un divertido sentido del humor, Rod, y
ademá s es muy observador.
La razó n por la que terminé decolorá ndome el cabello como Andy
Mackay de Roxy Music fue que ya habı́a intentado y fallado en hacer que
se pareciera al de Rod. El jodido peluquero grueso que má s tarde me
salvarı́a de convertirme en un personaje punk de dibujos animados con
el pelo puntiagudo como Johnny o Sid (por mucho que quisiera ser uno)
nunca me permitirı́a bromear como lo hizo Rod. Tuve que rociar un
galó n de Aqua Net en mi cabeza para que se levantara aunque sea un
poco. Si alguien hubiera encendido una cerilla cerca de mı́, habrı́a subido
como una antorcha humana. Debe haber parecido jodidamente ridı́culo.
Por suerte pude hacer un mejor trabajo con la ropa. Solı́a averiguar
de dó nde habı́a sacado Rod todo el equipo que llevaba puesto en las
portadas de los á lbumes, luego me dirigı́a al puente de Chelsea y lo
robaba en las tiendas de King's Road donde lo habı́a comprado. Por lo
general, tomaba el autobú s 137, mi vehı́culo de escape preferido. Take 6
era el lugar donde la gente de clase trabajadora que estaba bien iba a
comprar los pequeñ os trajes ajustados con las grandes corbatas de
arenque como los que usarı́an los cabrones normales que bailaban en
Top of the Pops . Se llamaba Take 6, pero yo siempre usaba Take 7. Dave
Brubeck se habrı́a detenido en 5.
Ese lugar no era lo su icientemente llamativo para Rod. Las
principales tiendas a las que iban las estrellas del rock eran Alkasura –vi
a Marc Bolan usando algo de allı́– y sobre todo Granny Takes a Trip.
Granny's, como lo llamaban los eruditos, era un lugar fantá stico con un
Cadillac asomando por la ventana delantera. Cambió mucho a lo largo de
los añ os, pero fue jodidamente genial cuando comencé a ir allı́. No me di
cuenta en ese momento, pero la razó n por la que literalmente podı́as
salir de allı́ con un traje de terciopelo con diamantes de imitació n que no
habı́as pagado era que los tipos que debı́an estar al frente de la casa
estaban cabeceando en la parte de atrá s. .
Harı́a todo lo posible para obtener los detalles correctos. Habı́a una
tienda en Old Church Street llamada Zapata's en la que encontré este
increı́ble par de zapatos blancos con un toque naranja en el medio y una
suela de crepé beige que habı́a visto usar a Rod Stewart. Cuando llegué
allı́, solo les quedaba un par, que era demasiado pequeñ o para mı́, pero
los compré de todos modos (obviamente, las zapaterı́as no son buenas
para robar, a menos que solo tengas una pierna). La ú nica forma en que
podı́a usarlos era abrochá ndome los pies por dentro, lo que era
jodidamente doloroso, pero valı́a la pena, aunque no iba a subirme a las
chimeneas de la central elé ctrica de Battersea con ellos.
Alrededor de la cima de mi ijació n con Rod Stewart, recuerdo salir
de mis apartamentos de Battersea y caminar por la carretera principal
donde está la casa de los perros. Eran alrededor de las cinco de la tarde
de un domingo, por lo que no habı́a mucha gente. En mi opinió n, me
habrı́a estado cortando un poco con mi cabello cuidadosamente
despeinado y mi guardarropa inspirado en Rod, aunque es posible que
haya estado cojeando un poco debido a mi determinació n de usar los
mismos zapatos que é l, aunque no lo hicieran. en realidad encaja.
De todos modos, mientras avanzaba tambaleá ndome, escuché el
rugido de un motor poderoso detrá s de mı́. Me di la vuelta y, por
supuesto, estaban Rod y un hermoso pá jaro conduciendo un
Lamborghini. En ese momento ni siquiera pensé en esto como
vergonzoso, ası́ de descarado era. Se sentı́a má s como si me estuviera
mostrando las piezas faltantes en el rompecabezas; tienes la apariencia,
ahora todo lo que necesitas es el auto y la chica. De cualquier manera,
fue má s como un sueñ o que la vida real, pero de initivamente sucedió .
Tambié n hubo un par de ocasiones en las que lo vimos a é l ya Ronnie
Wood en el Roebuck, uno de los pubs en King's Road a los que solı́amos
ir. Me debilitaba en esos momentos, porque Rod en particular y los Faces
en general eran mis ı́dolos en ese momento. Creo que sabı́a que si iba a
empezar a pensar en tratar de llegar a algú n lado con la mú sica, tendrı́a
que ser como parte de un grupo: no ser realmente capaz de cantar o
tocar un instrumento de initivamente serı́a un problema en cuanto a se
trataba de una carrera en solitario. Y habı́a algo en la forma en que los
Faces interactuaban entre sı́, la forma en que todo parecı́a tratarse de
buenos momentos, chicas, alcohol, fú tbol y los muchachos de la banda,
que era irresistiblemente atractivo. Eran una especie de banda de
gamberros, pero con estilo, vestı́an lindas camisas y pantalones, no
zuecos, campanas y bigotes como los hippies.
Nosotros, ese es mi pequeñ o equipo formado por Cookie, Hayesy y
Jim Macken, fuimos a verlos al Roundhouse en el verano de 1972. Fue
divertido descubrir, añ os despué s, que John Lydon tambié n estaba allı́
con sus amigos y tambié n lo estaba Glen Matlock, aunque aú n no
sabı́amos quié nes eran ninguno de ellos. Má s tarde, cuando la gente
estaba pensando en quié n in luyó en los Sex Pistols, en realidad nunca
decı́an Faces, porque no se considerarı́a lo su icientemente genial, pero
tomamos mucho de ellos, no solo al principio cuando intentá bamos
encontrar nuestro camino, pero todo el camino a travé s de la banda.
Como el ritmo de las canciones, para empezar. Porque Cookie y yo
é ramos los que establecı́amos los tempos, y la mú sica que má s nos
gustaba era la de ellos y los primeros Roxy Music, a quienes tratamos de
emular. En mi extrañ a mente, era casi como si fué ramos los Faces, que
fue la razó n principal por la que nunca jugamos tan rá pido, y tambié n
por la que la idea de copiar a los Ramones es tan ridı́cula.
Una de las cosas má s importantes de los Faces era que en un
momento en que la mú sica se alejaba cada vez má s, eran accesibles. Ese
concierto en el Roundhouse, se sintió como si la audiencia y la banda
estuvieran todos juntos en una gran iesta, donde si veı́as a Led Zep o
Pink Floyd o cualquiera de las grandes bandas, no podı́as acercarte al
escenario.
Estaba tan cerca del frente, abajo, mirando hacia arriba, que cuando
Ian McLagan arrojó su pandereta a la multitud al inal del espectá culo,
fui yo quien la atrapó . Todos los demá s estaban tratando de sacá rmelo
de encima, pero nunca iban a quitarme los dedos. Solo pensé , 'No, no,
estoy teniendo esto'. Cuando la banda volvió para el bis, Ian se acercó al
frente del escenario y dijo: 'Lo siento, pero necesito esa pandereta'. No
querı́a dá rselo, pero me prometió que me lo devolverı́a al inal de la
canció n, ası́ que cedı́. Y el momento má gico fue cuando me encontró
antes de salir del escenario y entregá rmelo. ¡Buena suerte consiguiendo
que John Paul Jones haga eso!
Mirando hacia atrá s, es fá cil ver có mo las cosas se intensi icaron en
té rminos de que yo no respetaba el espacio personal de los Faces. No
puedes darme ese tipo de mensaje, porque no tengo lı́mites. Unos meses
má s tarde, cuando los Faces tocaron en Wembley en octubre de 1972,
quité un panel de la puerta para que algunos de nosotros pudié ramos
entrar por la parte trasera del Empire Pool y nos colamos en su
camerino. Está bamos bebiendo su champá n y conversando con Ronnie
Wood, fue genial. No creo que cualquier viejo fan pudiera haber entrado
ası́ y salirse con la suya: todo se debió al hecho de que lucı́amos el papel
en la mejor paliza robada que King's Road podı́a ofrecer. Los de
seguridad probablemente pensaron que é ramos otra banda. O eso, o los
hijos mimados del viejo que era dueñ o de Warner Brothers.
Esa fue una gran noche para mı́ por otra razó n, porque el acto de
apoyo eran los New York Dolls, de los que muy pocas personas en Gran
Bretañ a habı́an oı́do hablar, ya que todavı́a faltaba un añ o para que
saliera su primer á lbum. Lo gracioso fue que casi todos los demá s allı́
parecı́an odiar la forma basura en que se veı́an y sonaban: muchos
faná ticos de Faces gritaban '¡Maricones!' y realmente dá ndoles un poco
de palo. Pero los amaba jodidamente, terminarı́an como una de mis
cuatro mayores in luencias, junto con Bowie, Roxy Music y los cabezas
de cartel de esa noche.
Si me hubieras dicho entonces que en un par de añ os estarı́a tocando
la guitarra de Sylvain Sylvain en una banda dirigida por el ex-manager de
los Dolls, eso probablemente habrı́a superado incluso mis fantası́as má s
irreales. Obviamente, esa gira no terminó demasiado bien para los Dolls,
ya que unos dı́as despué s de ese concierto, su baterista original, Billy
Murcia, murió en una bañ era cuando alguien trató de revivirlo
alimentá ndolo a la fuerza con café negro despué s de un Mandrax
accidental y sobredosis de champá n. No intenten eso en casa, niñ os.
Fue en ese momento que los cuatro, yo, Hayesy, Jimmy Macken y
Cookie, decidimos que, dado que ya parecı́amos una banda, bien
podrı́amos convertirnos en uno. No estoy seguro de si alguna vez
llegamos a un ensayo real, y mucho menos a escribir canciones, pero
ciertamente tenı́amos algunos instrumentos que se veı́an geniales. Jim
tenı́a un trabajo en una gasolinera en el que trabajó lo su iciente como
para comprarse un ó rgano Far isa. Incluso aprendió a tocar algunos riffs
de teclado copiando a Jon Lord, el viejo de Deep Purple. Stephen Hayes
iba a estar en el bajo, tenı́a un Hofner como Paul McCartney (aunque ahı́
terminaba el parecido). Cookie se habı́a comprado uno de esos kits de
baterı́a Premier con destellos azules y yo, al menos en teorı́a, iba a
cantar y tocar una guitarra Gibson robada. Todo el mundo tenı́a equipo
de marca, nada de esa mierda de Chad Valley o Woolworth, solo lo mejor
para lo peor.
Puede que no hayamos avanzado mucho en té rminos de tocar juntos,
pero mi amor por la mú sica en general y los Faces en particular me
estaba dando un nuevo enfoque cuando se trataba de robar. Ası́ fue
como terminé teniendo en mis manos el abrigo de Ronnie Wood. Bueno,
resultó ser el abrigo de Keith Richards, pero en ese momento pensé que
era de Ronnie. Sin embargo, el televisor portá til de initivamente era de
Ron.
The Wick era una gran casa grande en la cima de Richmond Hill que
una vez perteneció al actor John Mills (la actriz Hayley era su hija).
Ronnie Wood se lo habı́a quitado de alguna manera, no sé si lo compró o
lo alquiló , pero cuando los cuatro nos enteramos de que era donde vivı́a,
é ramos tan grandes admiradores que ı́bamos en coche hasta allı́. La
furgoneta Bedford de Jimmy Macken (que habı́a comprado para que la
banda saliera de gira, aunque todavı́a no habı́amos hecho ningú n
concierto) y aparcamos delante de su casa. A veces miraba a travé s de la
ventana de su sala de estar y nos saludaba y nosotros le devolvı́amos el
saludo y nos emocioná bamos mucho. Está bamos obsesionados; Al igual
que los niñ os que pasarı́an el rato en el hotel de una estrella de rock, en
realidad, solo que un poco má s callejeros.
Por supuesto, un faná tico normal y completo podrı́a haberlo dejado
allı́, pero no podı́a dejarlo ir. Tuve que empujarlo un paso má s allá .
Empecé a volver allı́ para merodear por mi cuenta. Un pequeñ o carril se
salı́a de la carretera principal y bajaba por el costado del jardı́n, luego al
inal habı́a otra entrada a lo que supongo que ahora era una casa de
hué spedes, pero en ese momento pensé que era parte de la misma
propiedad. De todos modos, encontré una manera de entrar allı́. No
recuerdo si salté la pared o si la puerta estaba abierta pero, de todos
modos, me colé allı́ y eché un vistazo.
Por suerte para mı́, no habı́a nadie, pero aun ası́ no me volvı́
demasiado loco. Todo lo que tomé fue un pequeñ o televisor portá til y el
abrigo que pensé que era de Ronnie. (Má s tarde descubrı́ que era de
Keith Richards, porque aparentemente escuchó que admitı́ que lo habı́a
robado y me ofendı́). En lo que a mı́ respecta en ese momento, no estaba
haciendo nada tan malo. Obviamente entré y me escabullı́ por la casa, lo
cual no deberı́a haber hecho, pero yo era un faná tico que querı́a algo
suyo como trofeo y mi ú nica forma de hacerlo era robar, al igual que las
chicas que gritan tratando de robar. arranca las chaquetas de las
espaldas de los Beatles.
No sé qué hice con ese abrigo al inal, probablemente lo vendı́, pero
desearı́a tenerlo todavı́a porque era un hermoso Crombie en espiga.
Añ os má s tarde vi una foto en un libro de Mick Jagger usá ndolo, por lo
que Keith podrı́a habé rselo quitado primero, por lo que sé , pero es má s
probable que simplemente intercambiaran ropa entre ellos, como hacen
las bandas.
Podrı́as pensar que robar algo es una forma extrañ a de demostrar
que amas a alguien, y supongo que en cierto modo lo es, pero cuando
miras el trasfondo del que vengo, tiene sentido. Mi padrastro, que estaba
destinado a cuidar de mı́, decidió joderme tan pronto como mi madre no
estaba cerca, ası́ que ese era el tipo de ejemplo que me habı́an dado. No
es que alguna vez miré a este tipo como una igura paterna. El no me
querı́a allı́ desde el principio, solo estaba en el camino.
La ú nica vez que recuerdo que hicimos algo bueno juntos fue el dı́a
de Navidad de 1972, cuando salimos a tomar una copa mientras mi
madre preparaba la cena. Me emborraché mucho, probablemente
porque me sentı́a muy incó modo con el coñ o, y cuando regresé , la
habitació n estaba dando vueltas cuando cierras los ojos y sabes que vas
a tener que vomitar. Abracé la base del inodoro por un rato, feliz
Navidad, y bajé para ver que Top of the Pops habı́a comenzado. Entonces
me emocioné mucho porque Rod Stewart estaba haciendo 'You Wear It
Well', y recuerdo que, borracho, acerqué mi cara a la pantalla en blanco y
negro, tratando de averiguar de qué color era su chaqueta.
9. EL TIPO CON LA PUNTA
Cuando regresé a Battersea desde Banstead Hall, mi madre y Ron se
compraron un periquito. Tal vez me habı́an extrañ ado má s de lo que
pensaba y necesitaban un reemplazo, pero cuando recordé lo que
probablemente le habı́a pasado a Brucie, me pareció extrañ o que
quisieran tener otra mascota. Sin embargo, ese periquito era divertido.
Se sentaba en su jaula en la sala de estar, y no habı́a estado mucho
tiempo con nosotros cuando comenzó a maldecir tanto que mi madre
tuvo que ponerlo arriba cuando llegó mi o icial de libertad condicional.
No hubo muchas risas en ese piso, pero nos reı́mos un poco al respecto.
Y unos añ os má s tarde pude probar la actuació n del periquito con Bill
Grundy...
Sin embargo, por el momento, la mú sica era una de las ú nicas cosas
en mi vida que se sentı́a limpia. Todo lo demá s era bastante mierda. No
me malinterpreten, estaba recibiendo má s que mi parte de patadas
adolescentes. Habı́a un pub al que solı́amos ir llamado Bird's Nest (muy
apropiadamente, dada la cantidad de pá jaros que atraı́amos allı́) en el
extremo oeste de King's Road. Un camino al lado iba al Puente Albert, y
unos cincuenta metros má s allá estaba la Farmacia Chelsea, donde
tenı́an una discoteca los ines de semana. Aunque ı́bamos allı́ desde los
quince o diecisé is añ os, eran bastante indulgentes con la puerta. No
recuerdo que a ninguno de nosotros nos pidieran una licencia de
conducir ni nada (buen trabajo tambié n). Simplemente dirı́as que tenı́as
dieciocho añ os y eso fue todo.
Yo no estaba buscando una relació n en ese momento. Habı́a una
chica, cuando tenı́a unos quince añ os, por la que sentı́ mucho cariñ o,
pero no estaba disponible porque ya tenı́a un tipo. No mucho despué s,
ella rompió con é l, pero en el momento en que supe que podı́a tenerla,
toda la lujuria que habı́a sentido desapareció instantá neamente.
Siempre me han atraı́do las aves ası́, las que no está n disponibles. Ese es
el encendido. Con los pá jaros normales, los que me quieren, me aburro
enseguida. No entendı́ por qué en ese momento, pero ahora me doy
cuenta de que probablemente todo volvió a ser como eran las cosas con
mi madre. Ella tampoco pareció estar realmente disponible, y luego la
situació n con mi padrastro deformó todo aú n má s.
Cualquiera que sea la razó n, subir a Piccadilly por una prostituta era
algo bastante normal para mı́ a partir de los quince añ os. El tema del
sexo todavı́a era nuevo para mı́, entonces, y era totalmente emocionante:
mirar para ver si la luz roja estaba encendida, luego subir las escaleras
pensando: 'Voy a tener sexo ahora mismo y todo lo que tengo que hacer'
hacer es darle estas 10 libras en mi mano, ni siquiera tengo que
convencerla. Daba miedo caminar por el Soho de noche, entonces,
porque habı́a un montó n de personajes sospechosos al acecho y un
sinfı́n de cosas criminales sin sentido. Incluso si no sabı́as exactamente
qué era, porque ese tipo de cosas no estaban tan expuestas entonces
como lo está n ahora, sabı́as que te estabas arriesgando, y eso solo
aumentaba la emoció n. Recibı́ el aplauso un par de veces porque nunca
usé condones en ese entonces. Todavı́a no lo sé , pero esa es otra historia:
ya es su iciente problema tener una erecció n a los sesenta añ os, sin
importar ponerle un puto globo encima.
Si el uso de bronces desde una edad tan temprana afectó o no mi
actitud hacia las mujeres, no me corresponde a mı́ decirlo. Pero cuando
cumplı́ diecisé is o diecisiete añ os, estaba a punto de tener un polvo
rá pido y hasta luego. Ese fue mi modus operandi. De eso se trataba todo
el asunto del glamour para nosotros. Cookie y yo nos acostá bamos con
muchos pá jaros, no al mismo tiempo (bueno, no por lo general). Pero
tampoco é ramos los muchachos estereotı́picos de la ciudad. Siempre
está bamos buscando algo un poco diferente. Ası́ fue como terminamos
dando vueltas con este par de drag queens llamados Dumb Belles.
Esto fue algú n tiempo antes de que conocié ramos a Malcolm
McLaren, y no recuerdo có mo sucedió . Podrı́amos haber estado en un
boozer donde estaban actuando y comenzar a salir con ellos despué s. De
cualquier manera, sé que Cookie y yo hicimos algunas iestas, lo cual era
bastante liberal para un par de chicos heterosexuales de clase
trabajadora. Fueron divertidos, sin embargo, y no recuerdo que nadie
haya intentado nada. Creo que estaban felices de tener un par de
sementales jó venes alrededor.
Los actos de drag eran muy populares en Londres a principios de los
añ os setenta: aportaban un poco de color a lo que era un paisaje
jodidamente sombrı́o y dickensiano. Era casi como una cosa familiar a la
que mamá s y papá s iban juntos a reı́rse, y los niñ os miraban a travé s de
las cortinas del pub para ver qué estaba pasando. Ahora, cuando me
visto como este personaje camp Fabian Fontaine de Earls Court en mi
Instagram, todo viene de esa é poca: fue entonces cuando toda esa forma
de hablar se plantó en mi cabeza. Obviamente podrı́a haber sido al revé s
despué s de lo que me pasó de niñ o, pero nunca odié a los homosexuales;
de hecho, me sentı́a muy có modo pasando el rato con ellos. Eran como la
multitud clandestina, que siempre era donde me sentı́a má s cerca de
estar en casa.
Estaba en Battersea a la edad de quince añ os cuando estaban
ilmando la ú ltima escena de la pelı́cula Villain , en la que Richard Burton
interpretó a un gá ngster gay. Eso fue bastante controvertido en ese
momento, y no creo que le haya hecho nada a su carrera. bueno a la
larga, pero estaba bien con eso. Lo ilmaron junto a la vı́a del tren,
debajo de los arcos, cerca de donde arrojarı́a esas rocas desde el puente,
y yo estaba allı́ en el fondo, mirando mientras se ilmaba.
Nunca supe si mi mamá o mi padrastro tenı́an idea del tipo de mierda
que estaba haciendo en ese momento, o si les hubiera preocupado si se
hubieran enterado. Sé que solı́a tener un grupo si la policı́a los llamaba;
la capa de invisibilidad seguı́a funcionando bá sicamente, pero los bordes
se estaban deshilachando un poco, especialmente cuando habı́a bebido.
La impresió n que tuve fue bá sicamente que estaban esperando que me
fuera a la mierda. Aun ası́, cuando todavı́a estaba en mi fase de Rod
Stewart en Battersea, recuerdo haber pensado: 'Me convertiré en una
estrella de rock y le conseguiré una buena casa a mi madre'. Ası́ que
todavı́a habı́a una parte de mı́ que era lo que llamarı́as normal en
té rminos de ambiciones.
Muchas personas que son alcohó licas le dirá n que estaban en marcha
desde el momento en que tomaron su primer trago. Es lo mismo solo
que má s con los drogadictos y la heroı́na. Pero no funcionó de esa
manera conmigo en ninguno de los dos aspectos. Cuando comencé a
recorrer King's Road con los muchachos (Cookie, Jim, Hayesy y Cecil, la
pandilla habitual), bebı́amos pintas de cerveza o vodka y lima. Pero no
era como si estuviera pensando en tomar una copa desde el momento en
que me levanté por la mañ ana. Echar el té seguı́a siendo de initivamente
mi primera preocupació n, con eyacular en segundo lugar.
Está bien, harı́a algú n que otro viaje al almacé n de Carlsberg, pero
eso era má s bien algo ocasional. Realmente no lo estaba azotando
todavı́a. Pero de initivamente noté una diferencia en la forma en que me
sentı́a cuando ponı́a alcohol en mi sistema. Me hizo sentir bien conmigo
misma. Cuando estaba sobrio, era bastante tı́mido, pero una vez que
tenı́a algo de alcohol, hacı́a cualquier cosa. Jimmy Macken era el mismo.
Provenı́a de un mal pasado, al igual que yo, en su caso con un padre
horrible y violento que lo golpeaba hasta la mierda pero luego lo jodı́a.
Creo que esto nos hizo má s propensos a instigar problemas:
simplemente tenı́amos menos que perder que los demá s. Ser siempre el
que inicia las cosas a veces es una buena manera de esconderse de eso.
Sé que Jimmy tuvo algunos problemas con Paul, porque pensó que
estaba jugando demasiado a lo seguro. Jimmy era bá sicamente un buen
chico que amaba a los Faces, pero rá pidamente se convirtió en un gran
bebedor y tambié n le gustaba pelear. Todo su asunto era golpear a
alguien tan fuerte que la pelea terminarı́a despué s de un golpe: era un
verdadero duro. Me gustaba menos la violencia, pero tenı́a el mismo
impulso de seguir bebiendo hasta que me emborrachaba y luego tenı́a
que hacer algo má s para mantener el alboroto. Para é l podrı́a ser
golpear a alguien, pero para mı́ serı́a tal vez tomar un Mandrax y robar
un auto.
Obviamente, combinar Mandrax con conducir bajo los efectos del
alcohol no es realmente una buena idea, porque es una pastilla para
dormir. Te dan una increı́ble sensació n de hormigueo, pero se supone
que debes tomarlos por la noche, para ayudarte a dormir, no cuando
sales de iesta o conduces autos robados a alta velocidad por las calles
de Londres. Pero cuando eres un niñ o no tienes miedo y no ves las
malditas consecuencias de lo que está s haciendo, al menos yo no las vi.
No recuerdo chocar contra otros vehı́culos deliberadamente, pero
cuando conducı́a en Mandrax, a veces rozaba el borde de otros autos
estacionados. Có mo nunca me detuvieron es un misterio para mı́, dado
que no tenı́a la edad su iciente para conducir legalmente y generalmente
estaba borracho y en un auto robado. La capa tambié n parecı́a funcionar
bien cuando conducı́a. Pero hubo una vez en que la policı́a casi me
atrapa. Solo lo recordé recientemente porque estaba hablando con el
tipo que arregla mis motos y tiene el mismo tipo de Austin Healey 3000
viejo que yo conducı́a con motivo de este encontronazo con la ley (la
diferencia es que en realidad es dueñ o de su).
Son autos encantadores, que es la razó n principal por la que me
robaron uno. Venı́a por Shepherd's Bush Green, donde está el Empire,
con un amigo cuando la policı́a intentó detenernos. Estaban en un
pequeñ o Morris Minor, en realidad es un auto Noddy, y allı́ estaba yo,
probablemente de diecisé is añ os, conduciendo este hermoso
descapotable rojo con la capota abierta. Fue jodidamente rá pido, y al
principio, cuando nos persiguieron por Wood Lane hacia la BBC y
parpadearon para detenernos, yo estaba como si les siguiera la
corriente.
Hay una cosa en Inglaterra con el Old Bill, al menos lo habı́a, no sé si
todavı́a lo hacen, donde en lugar de estacionar detrá s de ti cuando te
detienen, tienes que dejar que te alcancen y luego detenerte. Por
supuesto, en el momento en que los dos policı́as salieron de su auto
frente a nosotros, estaba justo al lado de la estació n de metro de White
City, me asusté . Puse el Austin Healey en marcha y tenı́a la intenció n de
esquivarlos, pero estaba acelerando tan rá pido que golpeé la parte
trasera de su automó vil antes de alejarme por la carretera casi hasta las
propiedades de White City. Luego, sin decir nada en realidad, supimos
que tenı́amos má s posibilidades de escapar si nos separá bamos; los dos
saltamos y nos fuimos por caminos separados.
Corrı́ a lo largo de las vı́as del tren y mi socio anó nimo en el crimen,
bueno, no estoy seguro de adó nde fue porque no estaba con é l, pero sé
que nunca lo atraparon. Poner uno sobre el Old Bill fue la má xima
emoció n. Si nos hubieran atrapado, tambié n nos habrı́an dado una
paliza, no solo por chocar contra ellos, sino tambié n por tener un auto
mejor que ellos. Despué s me pareció increı́ble que ambos nos
hubié ramos escapado. Sabı́a que correr por las vı́as era arriesgado, ya
que muchas personas mueren de esa manera, pero esas personas son
idiotas. El secreto es no correr por el medio de las vı́as, y si escuchas que
viene un tren, sal del camino. No es una ciencia exacta.
No era tan bueno para evitar accidentes en el lugar de trabajo. Mis
pocos intentos fallidos de conseguir un empleo legı́timo solı́an acabar en
algú n tipo de descalabro. Hubo un breve coqueteo con ayudar a un
lechero donde destrocé un maldito carro en el depó sito. Ni siquiera sé
por qué lo conducı́a; nunca debieron dejarme al volante tan temprano
en la mañ ana. Tal vez el tipo me pidió que se lo llevara pero, de cualquier
manera, deberı́a haberlo sabido mejor. Yo era demasiado rá pido para
vivir, demasiado joven para morir en esos dı́as, incluso al volante de un
carro de leche.
Dame una excavadora robada y estaba bien, pero cualquier cosa
vagamente legı́tima y me hizo pedazos. Simplemente no tenı́a capacidad
de atenció n para ningú n tipo de trabajo normal y responsable. Tambié n
habı́a una compañ ı́a de taxis, cerca de Shepherd's Bush, donde solı́a
lavar los autos por un breve tiempo, pero creo que algo que sucedió allı́
tal vez terminó con un taxi destrozado. Cuando pones todos estos
incidentes juntos, comienza a surgir un patró n. No creo que la cagué
deliberadamente, pero podrı́a haber sido la forma en que mi mente
subconsciente me decı́a a mı́ (y al mundo) que este tipo de trabajo
mundano y de baja categorı́a no era para mı́, y que ciertamente no
estaba cali icado para nada má s ejecutivo. . Excepto ser una estrella de
rock, por supuesto.
He visto entrevistas que hice cuando estaban los Sex Pistols en las
que dije que antes habı́a sido limpiacristales, pero creo que estaba
hablando por el culo. De todos modos, la mierda que estaba soltando
sobre todas mis aventuras sexuales sonaba má s como la trama de
Confesiones de un limpiador de ventanas que como algo que realmente
sucederı́a. Es posible que haya llevado el balde de algú n vejestorio unas
cuantas veces, pero en lo que respecta a limpiar una maldita ventana,
olvı́dalo.
Lo má s cerca que estuve de un trabajo real fue otro perı́odo como
ayudante de plomero, esta vez para una compañ ı́a de calefacció n y
ventilació n llamada Benham's. Conseguı́ el trabajo a travé s de una
agencia de empleo llamada Manpower. Tal vez el nombre era una pista
del hecho de que uno de los plomeros intentarı́a atraparme dentro de
una maldita caldera industrial gigante. El era otro que querı́a
masturbarme, no estaba tratando de follarme, y la forma en que mi
memoria se queda en blanco cuando trato de recordar exactamente lo
que sucedió sugiere que podrı́a haber dejado que me diera un pedal.
Ciertamente no habrı́a estado fuera de discusió n.
Algunas personas emiten esta puta energı́a. Tal vez una vez que haya
recorrido el camino de hacer cosas que no son normales, otros que está n
en ese camino casi pueden olerlo en usted. No se trata solo de que te
jodan y que la gente te vea como un objetivo. Algunas personas
simplemente nacen má s sexuales que otras, y de initivamente yo estaba
al frente de la ila cuando se repartı́a esa mierda. Tenı́a un recuerdo má s
feliz de ese trabajo, que le mostrará lo que quiero decir aú n má s
claramente. Creo que fue a la hora del almuerzo cuando el tipo con el
que estaba trabajando se fue a comer algo y yo me quedé atrá s y probé
esta gran aspiradora industrial en mi pene. De hecho, funcionó bastante
bien, por lo que recuerdo; al menos, no habı́a necesidad de un viaje a
Urgencias para que se lo quitaran.
Cuando no estaba realizando experimentos sexuales desviados con
aspiradoras de alta potencia, el trabajo con Benham solı́a implicar el
mantenimiento de salas de calderas en el West End. Pero el ú nico
trabajo que se destacaba de los demá s consistı́a en dirigirse al norte
hacia las tierras salvajes de Willesden. Allá arriba habı́a una fá brica de
salchichas de Wall, y recuerdo haber tenido que verlos sacri icando a los
malditos cerdos. Estos tipos raros con delantales cubiertos de burdeos
estaban haciendo el trabajo. Las caras extrañ as que tenı́an estos tipos,
parecı́an luná ticos. Pero, ¿no lo harı́as si todo lo que tuvieras que hacer
todo el dı́a fuera matar animales asustados?
No sé qué se suponı́a que ı́bamos a hacer, o qué tramaba el tipo al que
se suponı́a que debı́a ayudar, pero me dejó solo el tiempo su iciente para
que me alejara y observara todo el sombrı́o proceso. Los cerdos bajaron
de un camió n y los arrastraron a estos pequeñ os corrales, luego el viejo
les puso la gran pú a elé ctrica. Antes de que hubiera tiempo para ver si
estaban muertos o no, los enganchaban por los cascos y los enviaban
zumbando por esta jodida cinta transportadora con las patas traseras en
la parte superior y la cabeza colgando.
Primero pasaban por este horno que quemaba toda la piel, luego se
lavaban con chorros de agua. Los pobres cabrones no se detuvieron en la
cinta transportadora hasta que estuvieron en un paquete. Recuerdo
mirar hasta el punto en que el tipo con su gran cuchillo abrió el
estó mago y todo el maldito clarete salió por la mitad, entonces tuve que
mirar hacia otro lado. Ese lugar era solo un puto in ierno y nunca habı́a
visto algo ası́. Ni siquiera cuando el Chelsea jugó contra el Leeds. En lo
que a mı́ y al trabajo se re iere, ese fue prá cticamente el ú ltimo clavo en
el ataú d. Ciertamente fue para los cerdos.
La peor parte era que podı́as ver que algunos de los cerdos eran muy
inteligentes y no querı́an bajarse del camió n. El tipo con el diente
simplemente se subió allı́ y los clavó y hacı́an ese horrible chillido
chirriante que te dice lo asustados que está n. Cualquiera que te diga que
los animales de granja no sufren, nunca ha estado dentro de uno de esos
lugares, te lo digo. ¿Me dejó de comer salchichas? ¿Se jodió ? Pero me
enseñ ó una cosa.
Nunca iba a ser una de esas personas que aceptan lo que los demá s
piensan que debes hacer, porque ası́ es como terminas arrancá ndote las
entrañ as y envolvié ndote el culo en plá stico. Habı́a hecho un trabajo
normal durante diez minutos: eso era má s que su iciente. Si se tratara
del libro de otra persona, podrı́an intentar convencerte de que lo que
sucedió en esa fá brica era una especie de profecı́a de lo que les
sucederı́a a ellos cuando fueran absorbidos por la maquinaria de la
industria de la mú sica. Pero las cosas no funcionarı́an de esa manera
para mı́. En todo caso, yo era el tipo con el diente.
10. LA CUEVA DE LOS MUEBLES
Cuando era joven, a veces sentı́a que si deseaba algo con todas mis
fuerzas, podı́a conseguirlo por pura fuerza de voluntad. No puedo
hacerlo má s. Tal vez el impulso de hacer que las cosas sucedan fue una
reacció n al poco control que tenı́a sobre otras á reas de mi vida. Cookie
recuerda enviarme cartas durante un tiempo cuando estaba atrapada en
un lugar llamado Earls ield House en Wandsworth del que no recuerdo
absolutamente nada. Dice que fue durante los tiempos de glamour y que
estaba realmente enojado por perderme toda la acció n del in de semana
en Chelsea Drugstore, lo que suena como yo, ademá s de que tenı́a una
idea clara de escribir la direcció n en el sobre. Espero que no se haya
demorado demasiado en el contenido porque de todos modos no habrı́a
podido leerlo. Pero en cuanto a lo que estaba haciendo ahı́ dentro, es un
completo y jodido misterio.
Si fuera una prisió n, podrı́a haberlo entendido. La vieja Capa habı́a
recibido un poco de castigo en ese momento y algunas de las cosas por
las que me estaban engañ ando eran simplemente estú pidas. Una vez en
King Street, cuando estaba borracho, puse un ladrillo en el escaparate de
la tienda de mú sica pensando que me iba a llevar un montó n de
guitarras, pero habı́a una persiana dentro del cristal. Ası́ que estoy
parado allı́ tratando de averiguar qué hacer a continuació n (paralı́tico,
por mi cuenta) cuando el Viejo Bill se detiene y me pregunta qué estoy
haciendo. La mejor respuesta que se me ocurre es algo totalmente tonto
como: '¡Oh, aquı́ tienes! … No sé .' No es exactamente la jodida Pantera
Rosa, ¿verdad?
Creo que podrı́a haberme dejado escapar con una advertencia por
eso, como si pensaran que la vergü enza era su iciente castigo. Y cuando
busqué ese lugar de Earls ield House en lı́nea, parecı́a que solı́a ser una
casa de trabajo victoriana. Cuando se suponı́a que debı́a estar allı́, se
habı́a convertido en algo llamado 'Escuela de acogida', que suena como
una especie de casa a medio camino entre un reformatorio y estar bajo
cuidado. Hay fotos en blanco y negro de lı́neas de camas y nada suena en
absoluto. Buscar mierda en Google para tu propia tranquilidad nunca
funciona realmente, ¿verdad? Pero si no estaba allı́ por ser un chico
malo, presumiblemente era solo porque mi madre y Ron no querı́an
tratar conmigo.
Tal vez simplemente me desconecté mentalmente porque encontré
todo tan doloroso, y es por eso que no lo recuerdo. Es la mejor
explicació n que se me ocurre, de todos modos. Todo lo que hace es
veri icar nuevamente que tuve una educació n bastante mala: mis
credenciales son só lidas en esa á rea. A veces, en el fondo de tu mente, te
dices a ti mismo: 'Oh, no fue tan malo, tal vez solo esté s armando un
escá ndalo', pero luego surge algo que te pone en un error en
Wandsworth que ni siquiera puedes recuerdas y luego piensas: 'No,
tenı́a razó n: era una mierda'.
Aunque nos tomó un tiempo hacer que todo funcionara, la idea de
tener una banda al menos me dio algo a lo que aferrarme. Habı́a un chico
que conocı́amos de la escuela llamado Warwick Nightingale, 'Wally', lo
llamá bamos, porque era uno, pero en realidad podı́a tocar un poco la
guitarra. Tenı́a un ampli icador y una copia de Gibson Les Paul, y dado
que la primera formació n de la banda nunca llegó a un ensayo adecuado
porque Macken y Hayesy no estaban tan molestos, parecı́a que Wally
podrı́a estar listo. para tomar todo el asunto má s en serio. Solı́a
decirnos: 'Habé is robado todo el equipo, tambié n podrı́ais hacer algo
con é l', y tenı́a razó n.
Ya no hacı́amos las cosas por capricho de colegiales, y no tenı́a
sentido joder. Podrı́amos habernos arreglado sin la miserable carrera de
botes de Wally, pero nuestra buena apariencia natural fue su iciente
para sostenerlo, o eso pensamos, al principio. La mamá y el papá de
Wally tenı́an una casita con un jardı́n en Hemlock Road en East Acton y
no les importaba que pasá ramos el rato allı́, ası́ que se convirtió en
nuestra primera base. Hay una foto nuestra en Kew Gardens con estos
extrañ os atuendos. Es la formació n original, que somos yo, Cookie,
Wally, Jimmy Macken y Stephen Hayes.
Obtuvimos nuestro nombre original, The Strand, de 'Do the Strand',
la primera pista del segundo á lbum de Roxy Music. En la letra, Bryan
Ferry le decı́a a la gente que 'Haga el Strandski', la idea era que este era
el baile que todos los chicos geniales querrı́an hacer, ası́ que funcionó
bien. E ir al Rainbow en Finsbury Park para ver a Roxy Music en la gira
For Your Pleasure en la primavera de 1973 fue algo muy importante para
mı́ y para Cookie.
Otro gran concierto para nosotros en ese momento, bueno, un par de
meses despué s, fue en nuestro antiguo cé sped de Christopher Wren en
el estadio White City. Ese lugar solı́a ser una pista de carreras de galgos,
que no me atraı́a en absoluto (aunque, pensando en ello, supongo que
habrı́a algunas billeteras abultadas allı́), pero de vez en cuando
organizaban un gran concierto. Recuerdo que este fue encabezado por
Humble Pie, pero Cookie me asegura que fue The Kinks. Aparentemente,
la esposa de Ray Davies lo habı́a dejado y é l tuvo un pequeñ o berrinche
en el escenario y se retiró de la mú sica al inal.
Me molesta un poco que no tengo ningú n maldito recuerdo de esto
en absoluto, o de Sly y Family Stone, que estaban en el mismo cartel. Tal
vez estaba enojado. Los apagones parecen haber sido una caracterı́stica
para mı́ en esos espectá culos en el estadio de la Ciudad Blanca, ya que
Cookie tambié n insiste en que estuvimos allı́ para David Cassidy el añ o
siguiente, cuando una niñ a pequeñ a murió aplastada en el frente. Qué
cojones hubié ramos estado haciendo en un concierto de David Cassidy,
no tengo idea, ası́ que tal vez é l podrı́a estar tomando el pelo con eso.
Pero tal vez cuando habı́a un evento local nos sentı́amos obligados a
colarnos por nada.
De cualquier manera, la ú nica parte de ese gran concierto de Kinks
que se quedó en mi mente fue cuando el guitarrista Rick Derringer salió
con el Edgar Winter Group y tocó el solo en esa canció n, 'Rock and Roll,
Hoochie Koo'. Era tan jodidamente ingenioso que me voló la cabeza por
completo. Ni siquiera estaba pensando en mı́ mismo como un guitarrista
en ese momento, pero supongo que mirando hacia atrá s, la escritura ya
estaba en la pared para el pobre Wally.
Para entonces, habı́amos estado practicando juntos durante un
tiempo. Nuestro primer lugar de ensayo fue en el só tano de una tienda
llamada Furniture Cave, en el extremo inferior de King's Road,
aproximadamente a una milla al oeste de World's End, camino a Parsons
Green. Un montó n de tiendas de muebles estaban reunidas alrededor de
un pequeñ o puente jorobado. Instalamos nuestro material en esta
habitació n lú gubre con los ampli icadores hacia afuera para que se
sienta como un concierto adecuado. Cookie y yo está bamos en un viaje
mod en ese momento, tomando mucha velocidad y tratando de recrear
lo que era estar en Small Faces o The Who.
Obviamente, algunas de esas cosas continuarı́an con los Pistols
cuando hicié ramos 'Substitute' y 'What'cha Gonna Do About It?' pero
tendrı́a que pasar por má s de un iltro antes de que realmente
funcionara. El hecho de que a John no le gustara ese tipo de mú sica tanto
como a nosotros probablemente ayudó a darle un toque extra a las
voces. Yo tratando de cantar como Rod Stewart no iba a comenzar una
revolució n musical en el corto plazo, y probablemente é ramos
demasiado directos y sinceros en la forma en que abordamos las cosas
en ese momento. Bá sicamente, é ramos el renacimiento mod seis añ os
antes.
Por supuesto, no era tan reverente con el equipo de otras bandas
como lo era con nuestro propio material musical. Robé alguna que otra
guitarra de ese lugar cuando habı́a otras bandas. Fui allı́ solo un dı́a para
dar una vuelta, como era mi costumbre, y encontré todas las luces
encendidas con un montó n de equipo instalado. Era como si la banda
acabara de terminar una canció n y luego todos salieran a fumar un
cigarrillo. Incluso alguien con la capacidad de resistir la tentació n podrı́a
haber tenido problemas para hacer lo correcto en esta situació n, pero
para mı́ fue una obviedad, y aproveché la oportunidad para salir con un
Sunbird Special realmente bueno.
Me siento un poco mal por este porque aú n no he tenido la
oportunidad de hacer las paces con el tipo que lo tenı́a, y é l estaba en
una de mis bandas favoritas. No estaba ensayando con ellos en ese
momento, pero tenı́a su propio grupo. Sin embargo, es una tonterı́a dar
pistas sin decir su nombre, ¿no? No tiene sentido ser tı́mido con mis
vı́ctimas en esta etapa tardı́a del juego. Vamos, Ariel Bender de Mott the
Hoople. Te debo una maldita guitarra. El verdadero nombre de Ariel era
Luther Grosvenor. Pero aparentemente, al menos segú n Ian Hunter en el
documental de Mott, a Lynsey de Paul se le ocurrió su memorable
nombre artı́stico despué s de ver al guitarrista principal de la banda,
Mick Ralphs, caminar por una calle alemana doblando todas las antenas
de los autos para expresar lo enojado que estaba. é l era. Creo que todos
hemos doblado algunas antenas en nuestro tiempo, sé que lo he hecho.
No mucho despué s de esto (no creo que estuvié ramos buscando algo
de calor para mis dedos ligeros, simplemente era un trato mejor) nos
mudamos a la vuelta de la esquina a un lugar llamado Sumer en Lots
Road. Creo que el tipo que estaba allı́ estaba tratando de construir un
estudio que realmente no podı́a pagar y si lo ayudaba un poco,
podrı́amos usar el lugar por casi nada. La banda de Chris Spedding, The
Sharks, que apoyaron a Roxy Music en varias ocasiones, tambié n estaba
ensayando allı́. No creo que le robara nada entonces, aunque nuestros
caminos volverı́an a cruzarse en un futuro muy cercano.
En ese momento, Hayesy y Jimmy Macken se habı́an distanciado un
poco, y tenı́amos al cuñ ado de Cookie, Del Noones, para tocar el bajo y
reducirlo a un cuarteto. Del era otro chico de la Ciudad Blanca que solı́a
ir a Christopher Wren. Era dos o tres añ os mayor que nosotros, pero lo
conocı́a desde muy joven porque habı́amos sido skinheads juntos, y lo
veı́a mucho cuando me quedaba en casa de Cookie y é l estaba saliendo
con la hermana de Paul. . El ú nico problema con Del era que realmente
no podı́a jugar.
Por supuesto, esto fue en un punto en el que ninguno de nosotros,
con la excepció n parcial de Wally, sabı́a lo que está bamos haciendo.
Entonces no tocaba la guitarra, solo cantaba, pero tanto Paul como yo
sabı́amos que tenı́amos mucho que aprender y está bamos felices de
trabajar. Cookie estaba mejorando en la baterı́a, pero Wally solı́a decir
que yo era mejor tocá ndola. que é l y, para ser honesto, aunque dudo que
Paul esté de acuerdo conmigo, creo que todavı́a lo estoy. Somos
personas muy diferentes y é l juega má s con su cabeza, no literalmente,
quiero decir en su mente, mientras que conmigo es má s una cuestió n de
sensaciones. Supongo que serı́a del tipo de Charlie Watts, mientras que
para mı́ el mejor baterista de todos los tiempos es John Bonham, con
Keith Moon unos pasos por detrá s.
Conocı́ a Moonie una vez en la tienda de Malcolm y Vivienne, muy
pronto cuando todavı́a se llamaba Let It Rock. Salió de allı́ vestido de
terrateniente y dijo 'Buenas noches, señ ores' con esa voz
exageradamente pija con la que se escondı́a para lograr un efecto
có mico. Fue un momento emocionante, porque é l era un verdadero
ı́cono para mı́. La forma en que solı́a hacer rellenos de baterı́a sobre las
partes vocales estaba en todo el taller (no en el taller de Malcolm, en el
taller en general), pero de alguna manera siempre sonaba fantá stico. El
apodo de Moon estaba en el dinero: era un loco total. Ya no hacen que
les gusten é l y Bonzo, eso es seguro.
Aunque en realidad nunca tuve que hacerlo en un á lbum, encuentro
muy satisfactorio tocar la baterı́a incluso ahora, y a menudo me ha
gustado hacer un disco completo yo mismo como lo hizo Prince:
comenzando con la baterı́a y luego viendo qué sucede. . No serı́a algo
egoı́sta (bueno, no del todo), pero cuando has pasado gran parte de tu
vida explicando lo que quieres a los bateristas y nunca suena igual que
en tu cabeza, serı́a emocionante. para ver si realmente podı́a entregar el
ritmo exactamente como yo lo querı́a. No voy a intentar con Paul aquı́,
porque lo que hizo funcionó totalmente en Never Mind the Bollocks... y
alguien tocando la baterı́a de la forma en que yo lo habrı́a arruinado.
Las diferencias entre Cookie y yo podrı́an haber tomado fá cilmente
nuestras vidas en direcciones opuestas en este momento. Siempre habı́a
habido un contraste en el que é l estaba ocupado haciendo algo normal,
como jugar al fú tbol despué s de la escuela, mientras yo estaba fuera
espiando a Tom o robando en el almacé n de Harrods cerca de los
campos de juego de St Paul's School, en el mismo camino de sirga de
oportunidad que solı́a llevarme a la tienda de bicicletas en Putney:
¡asesiné ese truco! Una vez que llegamos a ese momento despué s de
salir de la escuela cuando los niñ os respetables está n tratando de
conseguir trabajo, Paul tomó un puesto de aprendiz como electricista en
la cervecerı́a de Watney. Pero no importaba lo duro que trabajara,
siempre parecı́a tener un poco má s de dinero que é l de las ganancias de
mis nefastas acciones, ¡bien!
Muchos niñ os como yo que dejan la escuela sin cali icaciones llevan
esa actitud al mundo con ellos. Cuando se siente que toda la estructura
econó mica y educativa está diseñ ada para mantenerlo en el fondo, es
natural tratar de encontrar una manera de poner todo patas arriba, y la
forma obvia de hacerlo es robando directamente o encontrando alguna
otra forma de estafar al sistema. Creo que probablemente hay má s de
esa mierda en Inglaterra ahora que nunca, porque el sistema se ha
atrincherado aú n má s, por lo que muchas de las pequeñ as carreteras y
caminos que solı́a haber para que las personas mejoren su situació n por
medios legales se han cerrado. abajo. Ahora las probabilidades está n
aú n má s a favor de los empresarios evasores de impuestos con una
educació n escolar pú blica, y en contra de las personas que trabajan duro
para tratar de hacer las cosas de la manera correcta. Puedo decir esto
sin que me acusen de parcialidad polı́tica, porque nunca formé parte de
ninguno de los dos grupos.
Una subsecció n de la comunidad a la que lamentablemente llegué a
pertenecer era gente a la que le robaron porque su socio en el crimen le
dio a su hermana un abrigo afgano robado. Eramos toda la aristocracia
de uno, te lo aseguro.
Habı́a un lugar en King's Road llamado Antiquarius que era uno de
esos mini-arcades que tienen muchas tiendas diferentes. Ademá s de un
montó n de puestos de antigü edades, habı́a una tienda de ropa llamada
Great Gear Trading Company en la que tenı́a el ojo puesto. Descubrı́ una
manera de entrar allı́ cuando estaba cerrado un domingo por la tarde y
volvı́ tres veces para vaciar el gar io. Nunca me atraparon en el acto,
pero lo que salió mal fue que uno de los muchachos que conocı́a de
Battersea vino conmigo y luego le dimos algunas cosas a su hermana
menor. Desafortunadamente, se destacó tanto entre la multitud con su
nuevo y elegante abrigo afgano que el Old Bill la detuvo.
Esto te muestra lo pobre que era por allı́, entonces. No importa Cathy
Come Home , habrı́a sido Cathy Fucked Off & Never Came Back , si Cathy
tuviera algo de sentido comú n. Sacaron a este niñ o y le preguntaron:
'¿De dó nde sacaste eso?' Ella dijo, 'Oh, fuera de é l', y le dijo a su hermano
que no tenı́a la edad su iciente para saber nada mejor. Luego me hizo lo
mismo a mı́, aunque no tenı́a esa excusa, y terminó siendo una de las
má s graves de las trece veces que me trincaron. (Sé exactamente cuá ntos
eran porque el nú mero de mis condenas penales casi impedirı́a que los
Pistols fueran a Estados Unidos unos añ os má s tarde cuando tratá bamos
de obtener visas).
Por suerte para mı́, todavı́a no habı́a cumplido los dieciocho añ os, ası́
que en lugar de ir a la prisió n para adultos me pusieron en el centro de
detenció n preventiva para menores en Stamford Brook, justo al lado de
Goldhawk Road. Cookie y yo volvemos allı́ para hablar de eso en las
caracterı́sticas especiales de nuestro DVD de la gira de reunió n de 2008.
Como estaba cerca de donde é l vivı́a, se acercaba y gritaba para
saludarme y yo lo saludaba desde la ventana. Lo ú nico que recuerdo de
ese lugar es que una noche estaba loca cuando un capullo horrible vino y
me orinó sin ninguna razó n.
Me desperté sintiendo algo hú medo en toda mi piel y luego lo vi salir
corriendo. Era este gran tipo negro. No sé cuá l era su problema conmigo
porque no habı́amos tenido ningú n encontronazo. Supongo que solo
estaba siendo un imbé cil por el simple hecho de hacerlo, pero fue
bastante extrañ o porque generalmente no era uno de los tipos que se
molestaban. Yo no era uno de los acosadores, pero tampoco solı́a ser
acosado. No recuerdo haber ido a pelear con é l despué s ni nada, como lo
hizo el personaje de mi amigo Ray Winstone en Scum . Solo pensé , 'A la
mierda, no nos involucremos'. Si la vida te está molestando de todos
modos, no tiene sentido golpearlo con tu paraguas.
Scum no se estrenó hasta unos añ os despué s, pero una pelı́cula que
ya mencioné y que tuvo una gran in luencia en mı́ en ese momento fue
La naranja mecánica . Era simplemente una pelı́cula brillante para
adolescentes. Creo que lo vi con Cookie en Shepherd's Bush cuando salió
por primera vez. Se retiró poco despué s despué s de mucha violencia de
imitació n: pensaron que iba a inspirar a los jó venes, y ciertamente me
inspiró . No tanto por cometer actos de crueldad inhumana como en
cuanto a mi gusto por la decoració n del hogar. No era solo el exterior de
mi bloque en Battersea el que se parecı́a un poco al lugar de la pelı́cula
donde caminan junto al agua; el interior de mi dormitorio parecı́a un
lugar donde Alex DeLarge se sentirı́a como en casa.
En primer lugar, tenı́a un esté reo realmente bueno (aunque no
escuchaba mucha mú sica clá sica). Tambié n habı́a una alfombra de piel
de leopardo que todavı́a tenı́a la cabeza. Todo lo que habı́a allı́ era de
primera calidad, mientras que todo lo demá s en el piso costaba má s o
menos dos peniques. Dado que mi madre y mi padrastro (quienes, hasta
donde yo sabı́a, estaban haciendo todo lo posible para ser ciudadanos
respetuosos de la ley en esa etapa) en realidad no tenı́an dos frijoles
horneados para frotar juntos, puedo ver en retrospectiva por qué estoy
viviendo ası́. el producto de una vida delictiva los habrı́a cabreado.
Desde luego, solı́a sacarle el pelo a Ron cuando tenı́an que venir a
recogerme de la comisarı́a. De initivamente tenı́a un resentimiento por
el hecho de que estarı́an trabajando duro todo el dı́a cuando todo lo que
estaba haciendo era robar cosas y luego ser atrapado o no.
Todo llegó a un punto crı́tico una noche cuando llegué tarde a casa y
me habı́an dejado fuera, ası́ que los desperté . A Ron no le gustó eso, pero
yo estaba creciendo demasiado para que é l me empujara má s, ası́ que
tuvimos una de esas peleas de mierda como las que el padre de Phil
Daniels tiene con é l en Quadrophenia . (Recientemente descubrı́ que
Lydon estaba preparado para el papel que interpretó Daniels; gracias a
Dios no lo entendió porque la pelı́cula se habrı́a arruinado). Ron me dijo
que buscara un trabajo y dije: 'No quiero algú n trabajo de mierda como
el que tienes', entonces se pueden haber lanzado algunos golpes, pero
nadie se recuperó por completo.
No me gusta la confrontació n, ası́ que sentı́ que mi mejor opció n era
simplemente irme a la mierda y nunca volver atrá s, que es má s o menos
lo que terminé haciendo. El hecho de que no tuviera ningú n otro lugar
en el que vivir realmente no me molestaba.
PARTE II: DURANTE
11. DEJA QUE SEA ROCK
Los dependientes de las tiendas de King's Road nunca parecı́an tan
contentos de verme. Deben haber tenido algú n tipo de prejuicio
irrazonable contra las personas que solo ingresaban a sus puntos de
venta para robar cosas. Como resultado, cuando entré en Granny's o
Alkasura o cualquiera de esos trucos má s elegantes, nunca sentı́ que
tenı́a derecho a estar allı́. Sin embargo, habı́a un lugar donde los
ré probos como yo parecı́an estar seguros de recibir una bienvenida un
poco má s cá lida.
La primera vez que entré en Let It Rock debe haber sido a ines de
1971 o principios de 1972. Habı́a otra tienda un poco genial allı́ antes,
pero creo que el dueñ o se fue a la mierda a Amé rica, dejando a Malcolm
McLaren y Vivienne Westwood con un punto de apoyo en 430 Camino
del Rey. Cuando regresó , se habı́an apoderado de todo, como una plaga
de polillas de alta costura.
Let It Rock tenı́a una vibra totalmente diferente a la mentalidad de
'compra algo y luego lá rgate de aquı́' de lugares como Take 6, y me atraı́a
mucho. Habı́a un sofá y una má quina de discos y se sentı́a como si
pudieras pasar el rato allı́. La má quina de discos no solo tenı́a cosas
viejas de las listas de é xitos como las de los pubs, estaba llena de cosas
geniales como Billy Fury y los Flamin' Groovies. Y las personas que
trabajaban allı́ tampoco eran idiotas. Eso no solo se aplicaba a Malcolm y
Vivienne, sino tambié n al personal al que se incorporaron para cubrir
cuando no estaban allı́. Si tuvieras un poco de tiempo para matar, lo cual
solı́a hacer mientras mis compañ eros estaban en la escuela o trabajaban
para ganarse la vida, entonces podı́as sentarte y conversar con ellos.
La tienda comenzó vendiendo una versió n actualizada de la ropa de
Teddy boy que mi madre y mi verdadero padre habrı́an estado usando
cuando se juntaron a mediados de la dé cada de 1950 (zapatos grandes
de burdel, pantalones ajustados, chaquetas drapeadas) con el extrañ o
traje zoot. arrojado a medida que pasaba el tiempo. Se sentı́a como lo
contrario de los destellos sueltos y los estampados é tnicos de la era
hippie, y creo que esa era má s o menos la idea. No lo consideré
anticuado, simplemente lo consideré genial.
Estaba tan impresionado por la atmó sfera del lugar que incluso
comencé a vestirme como un niñ o Teddy. Lo primero que compré allı́ fue
un par de pantalones de pinzas rosas, que fue una elecció n bastante
audaz en 1972, pero les dije que vivı́a al lı́mite. Eventualmente tambié n
me compré los zapatos y la cortina, aunque no recuerdo haberlos usado
nunca todos juntos. Nunca fui completamente eduardiano. Yo era una
especie de mitad Teddy boy, mitad maldito idiota de Battersea. Incluso
fui un par de veces a un club de Teddy boy en Liverpool Street. Fue en un
pub llamado Black Raven. ¿De qué otro puto color son los cuervos? –
donde los Ted posaban mirá ndose y escuchando a Eddie Cochran.
Para mı́ no era tanto la mú sica como la necesidad de sentirme parte
de un grupo, de conectarme con otra pequeñ a pandilla. Hombre,
deseaba tanto pertenecer; ya fuera para QPR, o los skinheads, o los
Teddy boys ni siquiera importaba demasiado. Solo tenı́a que ser algo .
Podı́as ver lo desesperado que estaba por el hecho de que incluso traté
de ser un hippie por un tiempo: en la é poca en que irrumpı́a en todas las
otras tiendas de King's Road, a menudo me veı́as jugando a los bolos con
bengalas de cuero remendadas. con botas de plataforma y un gran
abrigo afgano peludo.
En lo que respecta a las subculturas adolescentes britá nicas de los
añ os sesenta y setenta, fui casi todas ellas en un momento u otro.
Realmente no hubo demasiados que me pasaron por alto. En un nivel,
esto era justo lo que hacı́an los jó venes en ese momento: experimentar
cosas que tenı́an que ver con sus identidades, pero debido a que
realmente no tenı́a nada que me detuviera en té rminos de antecedentes
estables o un sentido de autoestima, Era libre de llevarlo mucho má s
lejos que los normies.
Por supuesto que no me di cuenta de esto en ese momento, pero
ahora puedo ver que probar el tamañ o de todos estos diferentes cultos
juveniles fue casi como el aprendizaje que tuve que hacer antes de
ayudar a comenzar uno nuevo por mi cuenta. Sin embargo, habı́a lı́mites,
incluso para mı́. Tuve suerte de que Jimmy Macken acabara con mi fase
hippie antes de que se saliera de control. Odiaba cuando comencé a
tratar de actuar como un tipo de rock progresivo. Me preguntaba algo y
yo decı́a: 'No sé , hombre, simplemente no es lo su icientemente
progresista'. Entonces é l conseguirı́a la joroba conmigo y me llamarı́a
capullo. Bá sicamente me habı́a reprendido por el hecho de que todo era
solo una pose, y yo no podı́a tener eso, necesitaba encontrar personas
que realmente me entendieran.
Aquı́ fue donde entraron Malcolm y Vivienne. No recuerdo
especı́ icamente la primera vez que conocı́ a Malcolm, pero
de initivamente habrı́a estado vestido como un niñ o Teddy (con
Vivienne como una niñ a Teddy). Charlamos y comencé a volver a Let It
Rock regularmente, una vez a la semana al principio, pero luego má s y
má s a menudo hasta que era prá cticamente todos los dı́as. Me sentı́
bastante en blanco a todo en ese momento, pero algo me empujaba a
entrar allı́. Como he dicho, tampoco se trataba solo de Vivienne y
Malcolm. Cuando no estaban en la tienda, yo estaba igual de feliz
charlando con las otras personas que trabajaban allı́.
Esto fue antes de que Glen Matlock o Chrissie Hynde estuvieran
dando vueltas. Recuerdo a un niñ o negro apuesto llamado Stuart que
trabajaba allı́, que era muy majestuoso pero tambié n un poco duro. Una
vez que me fui de casa y necesitaba un lugar donde quedarme, a veces
me iba a su casa , en la misma cama pero sin nada sexual.
De initivamente querı́a chuparme la polla, ¿quié n no lo harı́a? Pero yo no
lo estaba teniendo.
Nunca pasó nada sexual entre mis compañ eros y yo. Las pocas veces
que crucé al otro lado fueron en momentos extrañ os y aleatorios cuando
estaba solo. Sé que hubo un extrañ o rumor sobre mı́ y Paul, pero
de initivamente puedo decirte que eso nunca sucedió . Cuando
dormı́amos en la misma cama, lo que hicimos a menudo a lo largo de los
añ os, siempre era de pies a cabeza, con su cabeza en un extremo y la mı́a
en el otro. Dicho esto, hubo una vez que me despertó y me dijo: '¿Qué
diablos está s haciendo?' Ası́ que supongo que debo haber estado
frotando su pierna o algo ası́, pero estaba totalmente loco. Apuesto a que
todavı́a piensa que estaba tratando de localizarlo. No te halagues,
Cookie, solo te estaba tocando en mis sueñ os.
Estoy tratando de imaginar lo que Malcolm debe haber pensado de
mı́ cuando comencé a pasar el rato en la tienda. Evidentemente, é l no
creı́a que yo fuera uno de los chicos comunes y corrientes que paseaban
arriba y abajo por King's Road en ese momento vistiendo trajes
ajustados, corbatas de arenque y botas de plataforma, aunque pasé por
una fase de hacer que. Cookie lo llama el look de 'Adam Faith en Budgie ',
pero creo que era má s denim. Tambié n habı́a un poco de Bowie de la era
de Hunky Dory , con todas las camisetas sin mangas y esas cosas, pero no
estaba tan interesado en eso. Ziggy Stardust y Aladdin Sane fueron los
dos grandes á lbumes de Bowie para mı́: los discos anteriores, cuando
todavı́a tenı́a el pelo rizado, emitı́an una vibra má s folk, que no era
realmente para mı́. Se sentı́a má s como algo que la gente en cuclillas en
Portobello Road estarı́a escuchando.
De todos modos, volvamos a Malcolm. Supongo que se habrı́a dado
cuenta de la energı́a que tenı́a, la forma en que la mú sica y la moda me
importaban, y el elemento de jodido que signi icaba que no me
importaba demasiado nada má s. Les gustaban los bienes dañ ados,
Malcolm y Vivienne, pero no creo que fuera porque buscaban personas a
las que pudieran usar para poner en prá ctica sus ideas. Creo que fue
porque tambié n estaban bastante dañ ados.
Tal vez no tanto Vivienne, la vibra que recibı́ de ella era má s que
estaba aterrorizada de ser una chica normal del norte (tal vez habı́a
probado eso con su primer marido y ahora estaba yendo por el otro
lado), pero de initivamente con Malcolm. Era fá cil ver que habı́a tenido
una educació n muy confusa. Nunca supe exactamente qué era, pero
de initivamente sucedió algo extrañ o con su madre y su abuela, y se fue
de casa muy joven, como yo.
Má s tarde, cuando John entró en escena, nunca le darı́a cré dito a
Malcolm por eso. Debido a que Lydon provenı́a de una familia bastante
amorosa, no tenı́a en cuenta a las personas con una base menos segura
en la vida. Trató de hacer que McLaren fuera una especie de idiota
hippie de clase media, mientras que Paul y yo lo veı́amos má s como un
camaleó n, lo que puede sonar como algo bueno, pero cuando lo piensas,
trata de encajar con todos. a tu alrededor en lugar de simplemente ser tú
mismo es realmente un trabajo muy duro. Nos dimos cuenta de có mo,
cuando estaba saliendo con tipos tontos, Malcolm se ponı́a un frente
para tratar de sonar má s elegante de lo que era. Pero cuando salı́a
conmigo y con Cookie, se ponı́a como un idiota y un gallito.
Nunca me importó eso. Pensé que era gracioso la forma en que
Malcolm hacı́a eco de la gente para encajar con ellos, ya que eso solo
harı́a má s obvio lo diferente que era. Entendı́ por qué lo estaba
haciendo, porque yo siempre estaba tratando de encontrar una manera
de encajar tambié n. Es por eso que en añ os posteriores la idea de mı́, y
hasta cierto punto de Cookie (aunque era má s cierto de é l), siendo la
sala de má quinas sensata de los Sex Pistols estarı́a tan lejos de la
realidad. Porque yo era probablemente el mayor farsante de todos
nosotros. Bueno, tal vez no tan grande como Malcolm, quien cuando
vendı́a los pantalones de pinzas ideó una forma especial de pararse en
un á ngulo en el que doblaba la pierna a la altura de la rodilla para
mostrarlos. Era jodidamente gracioso.
La otra cosa sobre los primeros añ os de los Sex Pistols que la gente
realmente se equivocó es pensar que todo lo que sucedió fue planeado
por Malcolm desde el principio. Trató de pintarlo de esa manera una vez
que comenzó a creer en su propia publicidad, pero McLaren en realidad
se estaba perjudicando a sı́ mismo al hacerse pasar por esa especie de
igura Svengali de la vieja escuela que controlaba todo, como Larry
Parnes o el coronel Tom Parker.
Lo mejor de Malcolm en los primeros dı́as no era que tuviera todo
resuelto, sino lo abierto que estaba a captar lo que sucedı́a a su
alrededor y convertirlo en una nueva dimensió n. La direcció n no fue
dictada de arriba hacia abajo, vino de abajo hacia arriba. Incluso en la
forma en que é l y Vivienne cambiaron la tienda, primero a Demasiado
rá pido para vivir, Demasiado joven para morir, que tenı́a má s un
elemento motero, y luego a Sexo, no se trataba de que pensaran: 'Cierto,
nosotros'. Vamos a hacer que estos idiotas compren lo que queramos. Lo
que hicieron fue captar nuestra energı́a y transformarla en algo que
nadie esperaba.
Si piensas en mı́ y en Cookie, niñ os normales a los que les gustaban
los pá jaros y el fú tbol, pero que tambié n se sentı́an totalmente có modos
pasando el rato con chicos homosexuales y drag queens e yendo a todos
estos lugares extrañ os en Earls Court, eso era algo nuevo e inusual. .
Supongo que mucho de eso se superpuso con el glamour. La franqueza
de Sex saldrı́a en parte de eso. No digo que todo dependiera de nosotros
(ni siquiera me gustaban todas las cosas de bondage, esa no era mi taza
de té en absoluto), pero todos está bamos conectados a la misma
electricidad.
Malcolm y Vivienne eran como una luz brillante en la oscuridad de la
que provenı́a, y creo que me encantaron porque, como tipos de escuela
de arte, habı́an sido entrenados para encontrar exó ticas a las clases
trabajadoras. Y no solo era un verdadero 'erbert, sino que tenı́a un
sentido del estilo vanguardista. Ası́ que ambos tenı́amos la misma
atenció n al detalle, pero venı́a de diferentes perspectivas.
De initivamente me porté bien con ellos cuando se trataba de robar
cosas de la tienda. Bueno, lo hice una vez que llegué a conocerlos. Viv
pudo haber tenido problemas conmigo un par de veces al principio, pero
creo que incluso desde el principio ella sabı́a que no estaba robando
cosas de mala manera, era solo porque querı́a parecer el papel.
Con el paso del tiempo, comencé a hacer pequeñ os mandados por el
lugar. Eso me facilitó robarles la ropa sin tener que recurrir al robo.
Malcolm no sabı́a conducir, ası́ que lo llevaba a todos los sastres del este
de Londres a recoger muestras en el Mini verde oliva de Viv. No era uno
de los clá sicos trabajos italianos , sino la forma má s nueva de principios
de los añ os setenta. Por supuesto, yo era una infracció n de trá nsito sobre
ruedas, porque no tenı́a licencia ni seguro, pero eso nunca pareció
preocuparlos.
Su piso era un edi icio municipal realmente agradable en Clapham,
uno de esos bloques de Simon Templar de los añ os sesenta con solo
unos pocos pisos. Creo que tal vez Viv lo entendió cuando tuvo a su
primer hijo, Ben, con el tipo con el que estaba casada antes de conocer a
Malcolm. Luego, ella y Malcolm tuvieron otro hijo juntos, Joe, y los dos
niñ os compartı́an una habitació n con literas. A veces, cuando Ben no
estaba, lo acompañ aba a casa con su mamá y su padrastro despué s de
que cerrara la tienda para comprar algo de comer y quedarme a dormir
en la litera libre. Joe y yo nos llevá bamos bien, parecı́a un niñ o normal y
nos reı́amos juntos.
Realmente disfruté quedarme allı́. Estaba buscando cualquier lugar
donde pudiera conseguir una cama en este momento, y su lugar era algo
un poco diferente a quedarse en Hayesy's o Cookie's. Parecı́a má s un
taller, incluso un taller clandestino, que una casa normal, porque tenı́an
todas las má quinas de coser dispuestas en la sala delantera. En lugar de
descansar en sofá s alrededor de un televisor, estarı́an cortando patrones
en la mesa. Me interesaba la moda, ası́ que me gustaba observar el
proceso desde los diseñ os hasta que se armaba la ropa. Debido a que ese
tipo de detalles me importaban, fue emocionante estar en el lugar donde
se tomaron las decisiones. Lo gracioso fue que no recuerdo haber
escuchado mú sica en ese piso, tal vez porque no podrı́as haberla
escuchado con el ruido de las má quinas de coser. Supongo que las
má quinas de coser eran la mú sica.
La estancia comenzó cuando la tienda todavı́a era Let It Rock, por lo
que aú n no estaban haciendo las cosas de goma, y este se convirtió en un
muy buen momento para mı́; antes de que los Pistols realmente
estuvieran sucediendo. No sabı́a nada sobre el mundo en el que vivı́an
Malcolm y Vivienne: toffs, comida saludable, era lo opuesto a todo lo que
conocı́a. Estando en su ó rbita, sentı́ lo má s cerca que iba a estar de una
versió n londinense de Factory, la escena de Warhol que rodeaba a The
Velvet Underground, y realmente gravité hacia eso. Signi icó mucho para
mı́ que me hicieran sentir bienvenido allı́, que me trataran como a un
igual e incluso que me animaran un poco. Me dio con ianza.
Puedo ver que, desde afuera, Malcolm y Vivienne se visten con la
ropa que mi mamá y mi papá habrı́an usado y los hace parecer los
padres que siempre quise. Habı́a un poco de eso con Viv, para ser
honesto, porque ella era bastante maternal a su manera. Ella hacı́a cosas
como encenderme con una pasta de dientes decente, lo cual realmente
aprecié . Nunca me gustó , no es que no fuera atractiva, simplemente no
era mi tipo, ası́ que supongo que eso ayudó . La vibra de Vivienne era un
poco asexual. De una manera divertida , supongo que los sentimientos
que tenı́a hacia ella eran má s como los que tienes hacia una madre.
Sin embargo, no habı́a tanto de padre sustituto con Malcolm. Era má s
como un hermano mayor inteligente que habı́a ido a la universidad. A
pesar de que era casi diez añ os mayor que yo, era como si estuviera
teniendo su adolescencia tarde. Ciertamente se veı́a como un niñ o que
habı́a estado en la caja de disfraces. En cualquier caso, mi relació n con
mi padrastro habı́a sido tan jodida que realmente no estaba en el
mercado para una igura paterna. Creo que 'mentor' probablemente
serı́a una mejor palabra para lo que Malcolm fue para mı́.
Dicho esto, é l y Viv me adoptaron durante algunos añ os cuando
estaba solo en las calles y necesitaba a alguien que me indicara la
direcció n correcta. Me abrieron los ojos a un mundo nuevo que era
mucho má s colorido y emocionante, y estaba ansioso por explorarlo. No
era terco ni ignorante, estaba muy abierto a mejorar.
Por ejemplo, solı́amos salir a comer a ese restaurante vegetariano en
la parte de atrá s de Carnaby Street, donde el nombre era solo una
palabra: Cranks, eso era todo. No habı́a muchos lugares como ese a
principios de la dé cada de 1970 y sentarme allı́ con ellos para pedir
comida que no habı́a comido antes era muy emocionante. No solo querı́a
pescado y papas fritas o un curry, querı́a probar algo nuevo. Todavı́a soy
ası́ con la comida ahora. De acuerdo, la comida allı́ podrı́a no haber
parecido tan atractiva como el pastel y el puré al principio, pero estaba
muy sabrosa cuando la comı́as. No era vegano, solo vegetariano: quiches
y ensaladas, cosas ası́.
Siempre supe que habı́a un maldito lugar mejor que aquel del que
vengo, pero antes de empezar a pasar el rato en Let It Rock, no tenı́a
manera de entrar. Como una hoja de té sin hogar, lo má s cerca que pude
estar fue irrumpiendo en las casas de personas famosas y robando sus
cosas, y eso no fue lo su icientemente cerca. Todavı́a estoy agradecido
con Malcolm por darme la oportunidad de acompañ arlo y no solo ver
ese otro mundo, sino ser parte de é l. Ya sea que me presentara a chicas
del mundo del arte de vanguardia que estaban felices de que las follara,
o que me llevara al Speakeasy para pasar el rato con la aristocracia del
rock, todo era completamente nuevo, y creo que lo disfrutó . de lo
emocionante que fue para mı́ tambié n. Habı́a generosidad en Malcolm
en ese momento. Tenı́a sus jodidos problemas, igual que todos nosotros,
pero no pude evitar que me gustara, y obtuve mucho de nuestra
amistad, probablemente má s de lo que é l sabı́a.
12. EL FANTASMA DEL ODEON
Los dos lugares a los que má s me gustaba ir con Malcolm eran el
Speakeasy y el Roebuck. El Roebuck era solo un borracho normal a la
vuelta de la esquina de la tienda, pero allı́ habı́a algunas caras buenas,
incluso las Caras reales. El Markham era má s el pub hippie de la zona,
allı́ era donde iban los melenudos, pero el Roebuck era el lugar donde
solı́an pasar el rato los personajes clá sicos de Chelsea y los dueñ os de
las tiendas de King's Road. Estuvimos allı́ varias veces con John Bindon,
el actor/ma ioso que se acostó con la princesa Margarita. Era famoso
por su enorme pomo, que siempre sacaba para impresionar a todos, y no
nos defraudó , aunque nunca lo vi hacer su truco de iesta con los vasos
de cerveza llenos.
Lo má s destacado para mı́ fue cuando Malcolm me colaba en el
Speakeasy. No era fá cil entrar allı́, especialmente si todavı́a eras menor
de edad como yo, porque allı́ era donde el quié n es quié n de todos los
que eran alguien iban a beber despué s de horas. No solo estrellas de
rock: futbolistas, actores, todos. Ese gar io estaba en una pequeñ a calle
paralela a Oxford Street en el lado norte, y yo siempre estaba
molestando a Malcolm para que fuera un viernes o un sá bado.
Tendrı́amos algú n que otro encontronazo allı́ una vez que los Pistols
estuvieran funcionando hasta que todo se volviera un poco incó modo,
pero por el momento ese era mi destino favorito de in de semana.
¿Cuá l fue nuestro medio de transporte de elecció n? Todavı́a estaba
encendido el extrañ o motor robado. Una vez robé un Jaguar y lo llevé al
West End. El recuerdo es un poco confuso, pero ese podrı́a haber sido el
momento en que Mandrax realmente se puso en marcha, este pobre hijo
de puta se detuvo frente a nosotros en la carretera principal y
simplemente lo golpeé de lado, tiré su auto fuera del camino. Seguimos
adelante con todos pensando que era gracioso. Estoy bastante seguro de
que no resultó herido, pero podrı́a haber sido horrible. Mandrax, alcohol
y autos robados no es una buena combinació n, porque todo es una
jodida broma cuando está s en esas cosas.
Para variar, experimenté conduciendo vehı́culos que en realidad eran
mı́os. Recuerdo haberle comprado un auto al amigo del padre de Wally
Nightingale por 50 libras, pero el capullo me dio la espalda por
completo. Ese motor se descompuso tan rá pido que estaba seguro de
que habı́an hecho eso clá sico de poner aserrı́n en el tanque de gasolina
para que el auto funcionara unas pocas millas y luego simplemente se
parara. Ese fue el primer auto que tuve té cnicamente, pero ser estafado
solo me hizo má s decidido a conseguir algo decente, y tuve un bonito
Mini Cooper S azul por un tiempo despué s de eso.
Tambié n me hice con una minivan, que no solo era muy ú til para
transportar objetos robados, sino que tambié n me daba la opció n de ir a
algú n lugar si estaba desesperada. Unas cuantas mujeres jó venes
afortunadas tuvieron la oportunidad de ayudarme a probar el colchó n
que puse en la parte de atrá s: era un verdadero vagó n de amor British
Leyland, como la ú ltima escena de una pelı́cula de Bond, pero con el
presupuesto de un auto de juguete.
Ni siquiera ser dueñ o de mis propios autos me iba a persuadir de
intentar tomar un examen de manejo real. Era solo una de esas cosas
que parecı́an imposibles, ası́ que nunca me molesté en hacerlo. Y
recuerdo que Cookie dijo que era una pesadilla porque todo el estudio
era muy difı́cil. Es un poco como una palabra desencadenante para mı́,
'estudiar', ası́ que pensé : 'Fó llame, eso nunca va a suceder'. No pensé que
tenı́a la paciencia o la inteligencia para hacer nada de la manera
correcta. El mensaje que recibı́ de mi crianza y educació n fue que yo era
un pedazo de mierda que nunca llegarı́a a nada, y ese tipo de visió n
negativa de ti mismo puede convertirse fá cilmente en una profecı́a
autocumplida.
No serı́a legal en las carreteras hasta má s de diez añ os despué s,
despué s de mudarme a California. El examen de conducir en Estados
Unidos es pan comido: solo tienes que responder algunas preguntas y
dar la vuelta a la cuadra sin matar a nadie. Bá sicamente, un chimpancé
podrı́a pasarlo. De hecho, creo que fue diseñ ado especı́ icamente por la
industria automotriz estadounidense para garantizar que los imbé ciles
aú n pudieran comprar automó viles.
No recuerdo haber sido condenado por conducir autos robados o por
no tener licencia, impuesto de circulació n o seguro. Una vez má s, los
primeros añ os de la dé cada de 1970 fueron una é poca dorada para ese
tipo de delitos automovilı́sticos de bajo nivel, especialmente con la
antigua Capa de Invisibilidad en funcionamiento. Hoy en dı́a, con todas
las cá maras de circuito cerrado de televisió n conectadas por
computadora que tienen en Londres, me levantarı́a antes que el pico
incluso antes de poner la segunda marcha.
El ú nico delito menor que la Capa no me permitió salirme con la mı́a
fue follarme a las novias de mis compañ eros. Seguı́ haciendo esto y
tambié n me atraparon con las manos en la masa (y no solo con las
manos). Stephen Hayes, Jimmy Macken, incluso Cookie. Nadie estaba a
salvo. Fue horrible, de verdad. Debo haber sabido que estaba mal,
porque no querı́a confesarlo despué s, pero eso nunca me hizo
detenerme ni un segundo mientras lo hacı́a. No sé qué me estaba
impulsando, nunca sentı́ que estaba siendo competitivo, solo que
cuando surgı́a la oportunidad, no podı́a evitarlo.
Era un milagro que alguno de mis compañ eros todavı́a me hablara, y
mucho menos que me dejara jugar con sus bromas. No recuerdo que
nadie me confrontara realmente por esto en ese momento; ciertamente
nunca recibı́ el golpe en la boca que probablemente merecı́a, aunque a
veces, incluso ahora, alguien (generalmente Cookie) menciona algo que
me demuestra que no lo ha olvidado. Y hubo un momento extrañ o
cuando estaba dando vueltas por la casa de la madre de Stephen Hayes,
poco despué s de que todos supieran que me habı́a tirado a su novia de
ese momento, cuando un montó n de sus amigos vinieron y comenzaron
a insultarme.
Durante aproximadamente una hora estuvieron de pie justo en frente
de la cama en la que estaba acostado, dicié ndome lo idiota que habı́a
sido, y simplemente no podı́a enfrentarme a eso, ası́ que ingı́ no
haberme despertado. Fue bastante extrañ o y horrible. Yo estaba en la
cama de su hermano ingiendo que estaba dormido, mientras que
Hayesy yacı́a en su cama al otro lado de la habitació n sin decir nada
porque é l tampoco sabı́a có mo lidiar con eso. No se unió a pesar de que
tenı́a má s que derecho a hacerlo; de una manera extrañ a, creo que
incluso sintió pena por mı́. Y creo que eso hizo que sus compañ eros se
enfadaran aú n má s, ası́ que siguieron regañ á ndome y dicié ndome que
debı́a reconocer lo que habı́a hecho, mientras yo me quedaba allı́ tirado
con los ojos cerrados. Ese era mi enfoque de gran parte de mi vida en ese
entonces: joder a la gente y luego ingir que dormı́a con las
consecuencias.
La excepció n a esta regla, el ú nico acto infame por el que estaba feliz
de tomar la culpa en pú blico, fue el golpe má s grande en toda mi carrera
de robo de rock 'n' roll. Tuvo lugar, muy apropiadamente, dado lo grande
que este hito del oeste de Londres se vislumbraba en el paisaje
arruinado de mi infancia, en el Hammersmith Odeon. (Todos los que
tienen la edad su iciente para recordar sus dı́as de gloria todavı́a lo
llaman el Odeon.) Cuando yo rondaba por sus vigas como el Fantasma de
la maldita Opera, era un hermoso cine antiguo que era uno de los
lugares de rock má s importantes de Londres.
Albergaba a unas 3.500 personas, y muchas de ellas (al menos las
que conocı́an la zona) se habrı́an colado por la parte de atrá s a travé s del
laberinto de tú neles y salidas de emergencia. Supongo que la mejor
comparació n para los lectores estadounidenses serı́a el Ritz Ballroom de
Nueva York. No tanto Mercer Hall, pero tal vez un poco.
Como he dicho, la letra no suele ser el primer aspecto de una canció n
que me llama la atenció n, pero hay una lı́nea en 'Hang Onto Yourself' de
David Bowie en el á lbum de Ziggy Stardust que realmente se me quedó
grabada. Esa lı́nea era 'Lo amargo sale mejor con una guitarra robada', y
con motivo de los famosos espectá culos de despedida de Ziggy Stardust
de Bowie en el Hammersmith Odeon (aunque nadie sabı́a lo que iban a
ser antes de que sucedieran, ya que solo anunció que Ziggy retiro al inal
de 'Rock 'n' Roll Suicide' en la ú ltima noche) Decidı́ poner a prueba esa
teorı́a. Bueno, ası́ es como me gusta mirar hacia atrá s ahora. En ese
momento, probablemente era un poco menos un experimento cientı́ ico
y un poco má s 'Ese es un buen ampli icador... lo estoy teniendo'.
Tuve la suerte de ir a ambos espectá culos, y despué s se habló de una
gran cantidad de tonterı́as sobre ellos. Eran buenos y todo eso, pero
todas esas cosas sobre montones de niñ os teniendo sexo en todas partes
mientras se desarrollaba el concierto eran tonterı́as; eso de initivamente
era algo que habrı́a notado, pero todo lo que vi fue un montó n de
adolescentes obsesionados mirando a Bowie como é l era Dios y luego se
molestó mucho (pero probablemente no tanto como Mick Ronson)
cuando dijo que iba a golpear las cosas en la cabeza con las Arañ as de
Marte.
No estoy seguro de cuá l de las dos noches de cierre acerté . Si fue la
primera noche, eso ayudarı́a a explicar por qué la pelı́cula del evento de
DA Pennebaker tenı́a una calidad de imagen y sonido tan famosa, porque
habı́amos robado la mayor parte de su equipo ("nosotros" somos Wally
y yo, porque yo no creo que a Cookie le gustó ). Tendrı́a sentido si fuera
la primera noche, porque de lo contrario pensarı́as que habrı́an quitado
todo el material en lugar de dejarlo en el escenario para que el Fantasma
del Odeó n se lo llevara.
De cualquier manera, despué s del concierto, tenı́a mi minivan afuera
y simplemente entré y saqué todas las cosas del escenario que pude
meter en la parte de atrá s: el ampli icador de bajo Sun de Trevor Bolder
fue uno de mis mejores trofeos, ası́ como algunos platillos y este
pequeñ o micró fono Electro Voice que todavı́a tenı́a una mancha del lá piz
labial de Bowie. Por alguna razó n, recuerdo que Trevor siempre tenı́a
grandes patillas a juego con sus grandes muslos.
El guardia de seguridad roncaba con la boca abierta en la cuarta o
quinta ila, atrapando moscas. Apuesto a que no estaba muy feliz cuando
se despertó . Bueno, sé que no lo estaba, porque yo estaba allı́. Dejé el
primer camió n lleno en la casa de Wally y regresé a buscar todos estos
micró fonos de radio Neumann que se estaban usando para la grabació n,
ası́ que tiré el anzuelo con fuerza cuando vi que empezaba a volver en sı́.
No me persiguió , pero recuerdo mirarlo desde el escenario mientras se
movı́a en su asiento y pensaba: 'De initivamente es hora de irse'. No
recuerdo sentir ningú n escrú pulo por robarle el equipo a mi ı́dolo, solo
la emoció n total, especialmente cuando estaba en las noticias de Capital
Radio al dı́a siguiente.
Estaba contento cuando escuché eso con seguridad. Fue mi primer
poco de fama y me gustó . Es por eso que entiendo algo de lo que está
pasando en la mente de estos luná ticos que van y disparan una maldita
escuela solo para obtener sus quince minutos en las noticias. O el
maldito incendiario piró mano que ha prendido fuego a una casa y se
divierte escuchando el sonido de las sirenas. Es ese nivel de narcisismo
en el que te emocionas porque has dejado tu huella en el mundo y nadie
sabe que eres tú . Está s tan alienado de la humanidad que no te importa
cuá nto dañ o tienes que hacer para tener ese sentimiento.
Aunque estoy feliz, incluso orgulloso, de admitir el atraco de Bowie,
me gustarı́a aprovechar esta oportunidad para decir que no robé dos
guitarras, incluida una Gibson Les Paul de la casa de Rod Stewart en
Windsor. He visto estos robos vinculados entre sı́ en algunos relatos de
los primeros dı́as de los Pistols, que fá cilmente podrı́an haber sido,
simplemente no lo hice. No por ninguna consideració n especial por los
sentimientos de mi propio Ace Face, sino porque Windsor estaba
demasiado lejos de la ciudad para que yo fuera a una misió n de robo. Si
Rod hubiera vivido en Gloucester Road, habrı́a sido un juego justo.
Esos micró fonos Neumann probablemente valı́an quinientas libras
cada uno, pero no sabı́a su valor en ese momento, ası́ que me estafaron
con la venta. Fui al norte de Willesden oa algú n otro lugar para
encomendarlos a un compañ ero de Bernie Rhodes y probablemente me
dio diez libras por ellos. Me gustaba Bernie, era divertido. Paseaba
bastante por la tienda en ese momento y cuando salı́amos a comer
juntos o nos reunı́amos en los conciertos, nunca solı́a pensar: '¿Quié n es
este cabró n?' Obviamente terminarı́a teniendo bastante in luencia en
algunos de los emocionantes eventos musicales que estaban a punto de
desarrollarse. Pero que me jodan, ese hombre sabı́a el valor de una libra.
En ese momento, a ines del verano y otoñ o de 1973, la mú sica estaba
llegando a lo que podrı́a llamarse el inal del glam. Mott the Hoople's
Mott ( mú sica de chico de botas solo con botas de plataforma) y Human
Menagerie , el primer á lbum de Steve Harley y Cockney Rebel, que era un
poco má s ligero y meló dico con cuerdas puestas, eran grandes favoritos
mı́os y de Cookie. Creo que Harley tenı́a un huevo escocé s dudoso (es
decir, una pierna) porque habı́a tenido polio o algo ası́, ası́ que tuvo que
usar una de esas botas construidas. Wally me mencionó una vez que
llevé el primer á lbum de Queen y el sencillo de 'The Rocker' de Thin
Lizzy a los ensayos tambié n, lo cual no recuerdo pero suena bastante
bien.
Vimos a Queen apoyando a Mott the Hoople en un famoso concierto
en el Hammersmith Odeon donde hubo un motı́n. Ambas bandas
tuvieron que tocar en dos shows porque el concierto estaba
sobrevendido, y por alguna razó n, creo que intentaron detener el bis de
Mott bajando la cortina de seguridad , de repente todos comenzaron a
destrozar el lugar. Fue jodidamente excelente. Queen tambié n era bueno
entonces, má s un grupo glam de hard rock que el tipo de pop extrañ o en
el que se convertirı́an, pero de cualquier manera, Mercury
de initivamente todavı́a estaba subiendo en esa etapa.
En cuanto a nuestra banda, la perspectiva de que tomá ramos nuestro
lugar en la vanguardia del rock todavı́a parecı́a claramente jodidamente
distante. Estuve tratando de involucrar a Malcolm durante un tiempo
porque pensé que podrı́a ayudarnos, pero al principio no parecı́a
demasiado preocupado por nosotros, y no creo que nuestro nombre
cambie de The Strand a Swankers hizo cualquier cosa para convencerlo
de que está bamos a punto de llegar a lo grande. Sin embargo, cuando
inalmente sacó el dedo e hizo una contribució n, fue grande.
Del Noones realmente no estaba rindiendo como bajista, parecı́a
perderse muchos ensayos y no estaba aprendiendo tan rá pido como el
resto de nosotros. Ası́ que Malcolm nos puso en contacto con Glen
Matlock. Ya conocı́a a Glen, porque trabajaba en la tienda los sá bados.
Podrı́a haberme impedido robar algo una vez, pero no se lo reprochaba.
Y Cookie pudo haber jugado fú tbol contra é l en la escuela. De todos
modos, Malcolm nos reunió en un concierto de Thin Lizzy en el
Marquee, y unos dı́as despué s, Glen vino a Wally's para una audició n.
Creo que tocó 'Miss Julie's Farm' y 'Three Button Hand Me Down' de The
Faces. Tuvimos esa conexió n de haber ido todos al show de Roundhouse,
y la gran ventaja fue que Matlock no solo cojeaba entre ellos, realmente
podı́a hacerlo.
Ahora que tenı́amos un miembro y medio (si cuentas a Wally) que
realmente podı́an tocar sus instrumentos, realmente podrı́amos
comenzar a hacer algo. El ú nico pequeñ o inconveniente con Glen era que
habı́a ido a Clement Danes, que era la escuela primaria al otro lado del
Westway de Christopher Wren. Desde nuestro punto de vista, ese lote
era la corteza superior. Para empezar, vestı́an uniformes verdes y
amarillos (los nuestros eran completamente negros), por lo que
obviamente eran ponces perfumados.
Glen estaba bien, y tanto Cookie como yo nos llevamos bien con é l,
pero desde el principio tuvo que cargar con el estigma de ser el
(relativamente) pijo de la banda. No era exactamente Stephen Fry, pero
tenı́a antecedentes familiares estables y era el tipo de niñ o al que se le
permite tomar prestado el auto de su padre, que estaba a un milló n de
millas de có mo vivı́amos el resto de nosotros, especialmente yo.
De initivamente venı́a del lado correcto de las vı́as (o de la A40, en
nuestro caso), que inalmente resultó ser el lado equivocado en lo que
respecta al punk.
Si hubié ramos comenzado una banda como Yes, obviamente Glen
habrı́a sido un activo: podrı́amos haberlo convertido en el lı́der y podrı́a
haber apuntado con el palo como solı́a hacerlo Jon Anderson. Tal como
estaban las cosas, sus contactos en la escuela de arte serı́an má s tarde
muy ú tiles para hacer despegar a los Sex Pistols. Ası́ que no fue de
extrañ ar que se volviera un poco amargado por un tiempo cuando lo
echaron un par de añ os despué s.
13. 'SCARFACE, SCARFACE, CICATRICES
DE OREJA A OREJA'
Otra forma en la que Malcolm demostró que estaba empezando a
interesarse por la banda fue arreglá ndonos un poco de tiempo de ensayo
en el centro comunitario de Covent Garden, poco despué s de que Glen se
uniera. Pero fue muy complicado subir todo el material allı́, y el
verdadero avance para conseguir un lugar regular para practicar
provino del padre de Wally.
McLaren serı́a el que recibirı́a todos los elogios (y la culpa) por ser el
Svengali de los Sex Pistols, pero el padre de Wally le estaba dando una
oportunidad por su dinero allı́ por un tiempo. Está bien, principalmente
asomarı́a la cabeza por la puerta y preguntarı́a si alguien querı́a ir al
pub. Pero se le ocurrieron algunas palabras para una de nuestras
primeras canciones originales, 'Scarface', que le dio una aportació n
creativa má s directa a nuestra mú sica de la que jamá s habı́a tenido
Malcolm. No puedo recordar toda la canció n, creo que John la tomó y
cambió las palabras para hacerla irreconocible un poco má s tarde, pero
una lı́nea de initivamente decı́a 'Scarface, Scarface, scarred from ear to
ear'.
No era exactamente 'Bridge Over Troubled Water', pero
de initivamente estaba a la altura de mi ú nico esfuerzo de composició n
original en ese momento (que má s tarde, con la ayuda de John, mutarı́a
en la canció n de Sex Pistols a veces llamada 'Seventeen' y a veces '
cé sped perezoso'). La mayor contribució n del padre de Wally fue
conseguirnos el lugar de ensayo estable que necesitá bamos si alguna vez
ı́bamos a ponernos al dı́a para un concierto real. Era un poco tra icante
que trabajaba como electricista y tenı́a contactos tanto en el sindicato
como en el mundo de la televisió n. Cuando su empresa obtuvo el
contrato para desmantelar los antiguos Riverside Studios de la BBC
junto al rı́o en Hammersmith, donde el tonto estaba tratando de
atraerme, Swankers estaba dentro como Flynn.
Es fantá stico allı́ abajo, justo al lado del hermoso puente
Hammersmith. Si fuera a vivir en Londres ahora y tuviera dinero,
de initivamente serı́a allı́. El estudio estaba impecable; de hecho, fue
probablemente uno de los mejores escenarios sonoros de Europa. Toda
esta mú sica increı́ble se habı́a hecho allı́, y está bamos en el tré bol.
Podrı́amos dejar todo nuestro equipo robado instalado sin ningú n temor
de que alguien como nosotros viniera y lo robara, habı́a algunos barriles
de cerveza que Cookie habı́a liberado de su trabajo en la cervecerı́a a lo
largo del rı́o, y Glen dice (Yo no en realidad recuerdo esto, pero no creo
que se lo inventara) habı́a incluso un callejó n de folladores muy ú til para
mı́ al que podı́a ir si necesitaba un descanso rá pido para mirar a Tom.
Salir con Malcolm me estaba brindando una mejor clase de
oportunidad sexual. Ahora me estaba alejando del mundo del zapatero
hacia cı́rculos má s artı́sticos, que eran mucho má s atractivos para mı́,
estaba conociendo mujeres que no sabı́an nada acerca de dó nde vengo y
que de todos modos no les habrı́a importado. Judy Nylon era una especie
de chica estadounidense vanguardista sobre la que Brian Eno escribió
una vez una canció n, y nos querı́amos mucho. Tenı́a un rostro hermoso.
Má s tarde, Judy formó un dú o llamado Snatch con una mujer llamada
Patti Paladin. Creo que Eno produjo sus discos, por lo que
de initivamente era un faná tico.
Chrissie Hynde fue otra que fue una verdadera volteadora, y lo digo
como un cumplido porque yo tambié n lo fui (y lo sigo siendo, en mis
mejores momentos). Todavı́a no he leı́do su libro, ası́ que no sé cuá nto
espacio me da, ¿media pá gina, una pá gina completa, incluso? ¿Dice algo
bueno de que nos follemos?
Cuando la tuve en mi programa de radio hace unos añ os, pensé que
planeaba avergonzarme sacando algunos detalles ı́ntimos, ası́ que entré
primero y puse toda nuestra ropa sucia sobre la mesa desde el principio.
No faltaron, te lo aseguro. Cuando Chrissie trabajaba en la tienda,
cerraba el lugar y ponı́amos en prá ctica el evangelio del sexo de Malcolm
y Vivienne. En ese momento me hubiera sorprendido saber que iba a
tener su propia banda y escribir un montó n de canciones clá sicas como
si le hubieras dicho que algú n dı́a yo serı́a una personalidad de la radio
de Los Angeles preguntando ella sobre la vez que la tuve sobre esa
bañ era en una iesta. Pero ese tipo de sorpresas es de lo que se trata la
vida, ¿no es ası́? Y Chrissie ha sido una buena amiga a lo largo de los
añ os. Espero que ella diga lo mismo de mı́.
Habı́a tanta acció n en ese momento que incluso Glen estaba teniendo
algo. Una vez, Malcolm trajo a la esposa de John Cale en ese momento
(que ahora está muerta, de lo contrario, solo habrı́a tenido que decir 'la
esposa de una estrella de rock lı́der', lo que habrı́a sido un poco
bromista) para vernos ensayar en el Orilla. Despué s del ensayo,
decidimos bajar a Brighton para reı́rnos, los seis metidos en mi minivan
(tambié n conocido como el shagmobile). Por alguna razó n, y esto
demuestra que los gustos no se tienen en cuenta, la esposa de Cale solo
tenı́a ojos para Matlock. Creo que ella le hizo una mamada en Riverside
Studios, lo que debe haber sido un poco revelador para é l, ya que creo
que todavı́a estaba en la escuela en ese momento y no estaba tan
versado en estos asuntos como yo y Cookie. . Y cuando llegamos a
Brighton, ella estaba sobre é l como una vı́bora.
Decidimos quedarnos en uno de los grandes hoteles frente al mar, no
en el Grand, donde el IRA intentó bombardear a Margaret Thatcher, sino
en el Majestic, que estaba uno o dos peldañ os por debajo de la escalera
en té rminos de precio, pero aú n ası́ era bastante elegante para nuestros
clientes. está ndares Tenı́a esos grandes balcones, como el hotel de
Quadrophenia.
Malcolm habı́a olvidado la combinació n de su billetera como de
costumbre (aunque era bastante bueno para recordar las combinaciones
de la de otras personas), por lo que la señ ora de Cale terminó buscando
dos habitaciones en el ú ltimo piso: los tortolitos obtuvieron una, y yo,
Malcolm, Cookie y Wally consiguió el otro. Como puede imaginar, estar
atrapado en una habitació n con esos tres fue menos que un tonel de
risas: el ganado se transporta en mejores condiciones, ası́ que decidı́ dar
un pequeñ o paseo por el alfé izar de la ventana para ver qué estaba
pasando en la habitació n de al lado. puerta.
No sentı́ que estaba arriesgando mi vida, no era una cornisa estrecha,
y yo era como una cabra monté s a esa edad, especialmente cuando habı́a
un poco de grati icació n sexual por poder al inal de la escalada. No
recuerdo que se me ocurriera nunca la posibilidad de caerme en mis
excursiones nocturnas a los tejados, excepto en ese momento en que los
porteros me sujetaban del tejado del Hammersmith Palais.
Lo que estaba haciendo en esta ocasió n se habrı́a visto impresionante
desde el paseo marı́timo, ¿es un pá jaro? ¿Es un avió n? No, es el miró n
sin miedo a las alturas. ¿Tenı́a un pedal mientras miraba furtivamente?
Un caballero nunca cuenta... aunque puede pedir que se tomen en
consideració n un par de cientos de ofensas similares.
Glen no sabı́a que yo estaba allı́, lo cual fue un buen trabajo ya que
probablemente lo hubiera desanimado. O eso, o podrı́a haber corrido las
cortinas. Nunca se habrı́a enterado de que tenı́a una audiencia si hubiera
sido capaz de resistir la tentació n de darle consejos sobre sexo durante
el desayuno a la mañ ana siguiente. Una vez que me preguntó có mo sabı́a
lo que estaba haciendo, tomó la noticia bastante bien. La banda que toca
unida permanece unida; bueno, por un tiempo de todos modos.
Todo el asunto de la esposa de Cale fue muy discreto en ese
momento; supongo que The Velvet Underground fue un legado hacia el
que incluso Malcolm se sintió bastante respetuoso. Dado que ella habı́a
sido una de las groupies de Frank Zappa, los GTO, y creo que se acostó
con Kevin Ayers en ese gran concierto que é l y Cale dieron en el
Rainbow con Eno y Nico, no era como si la Sra. Cale fuera la conquista
del mundo. siglo. No fui a ese concierto en 1974 cuando sucedió , pero
ahora tengo el CD. Aparentemente, Cale estaba tan enojado por el
episodio de la polla de Ayers que escribió la canció n 'Guts' al respecto.
Por otra parte, era un jodido gring tan miserable cuando apareció en mi
programa de radio unos añ os má s tarde que cualquier pá jaro con el que
estuviera probablemente hubiera querido follar con alguien má s.
Para los amantes de la mú sica del gusto y el discernimiento,
mantener los está ndares en 1974 se estaba volviendo cada vez má s
difı́cil. Todavı́a habı́a algunas cosas geniales; solo tenı́as que buscarlo un
poco má s. El primer á lbum de Be-Bop Deluxe, Axe Victim , y Kimono My
House de Sparks fueron grandes á lbumes para mı́ y Cookie: nos
sentá bamos en su habitació n durante horas escuchá ndolos. No sabı́a
esto en ese momento, pero Sparks era una de esas bandas que tuvo que
venir al Reino Unido porque nadie en Estados Unidos los entendió . Es
curioso có mo funciona eso: no necesariamente podrı́as adivinar a las
personas a las que les sucederı́a a partir de su mú sica. Ciertamente se
aplicó a Jimi Hendrix.
El principal problema a mediados de los setenta era que las grandes
bandas (Led Zep, The Stones, Pink Floyd, tal vez incluso The Who) se
habı́an vuelto demasiado grandes, mientras que las listas de é xitos
estaban llenas de idiotas como Mud y Chicory Tip. Estas eran personas
que probablemente se hicieron la ropa por el tipo en esa tienda
divertida Carnaby Cavern justo al inal de Carnaby Street. Su lema era
'Tú lo dices, lo haremos' y toda esa escena era una estupidez de primer
orden. A nadie le iba a cambiar la vida al ver a Dave Hill de Slade en Top
of the Pops con ese estú pido peine clavado en la cabeza.
Lo del pub-rock serı́a una especie de reacció n a esto: tratar de llevar
las cosas a lo bá sico para hacerlas má s emocionantes de nuevo. Todavı́a
no tenı́a ese nombre, pero ya estaba empezando a suceder. Ibamos a
muchos conciertos en ese momento, a menudo en lugares má s
pequeñ os. El Fulham Greyhound era uno de mis favoritos, con toda la
madera adentro. Vi tantas bandas allı́: Thin Lizzy, Mott the Hoople, The
Groundhogs.
Evidentemente, mi supersentido criminal no me habı́a abandonado.
Todavı́a tenı́a los ojos abiertos para un sabroso equipo. A veces iba a ver
una banda, decidı́ no robar su material de antemano porque querı́a
escucharlos, y luego me arrepentı́a, porque eran una mierda. Uriah Heep
fue uno de ellos, y Genesis, a quien vi con Peter Gabriel cuando tenı́a
todo el maquillaje y todo eso, por lo que todavı́a estaban a punto de
colarse en la categorı́a de glamour. ¡Imagı́nese todos los problemas que
podrı́a haberle ahorrado al mundo si hubiera robado todas sus cosas!
Solo porque me estaba portando bien en la tienda de Malcolm y
Vivienne no signi icaba que estaba descuidando mis deberes de ladrona
en el lado de la moda. Conocerlos me puso en el camino interior a
algunas de las buenas tiendas que no todos conocı́an. Habı́a un lugar en
Covent Garden llamado City Lights que estaba dirigido por un tipo
llamado Tommy Roberts, una especie de chico de carretilla / tipo
vanguardista. Habı́a tenido otras tiendas, y es posible que haya estado
involucrado en la creació n de Let It Rock. Tambié n pasó a dirigir Kilburn
and the High Roads, la superior banda de pub-rock en la que estaba Ian
Dury antes de reunir a Blockheads.
De todos modos, se podrı́a decir que este lugar de City Lights era un
trato exclusivo porque Roxy Music compró algunas de sus prendas allı́.
Creo que de ahı́ tambié n vino el traje Pin-Ups de David Bowie. Ademá s,
no podı́as simplemente entrar por la calle, tenı́as que tocar el timbre y
que te llamaran. Estaba en esta zona extrañ a en la parte trasera de
Covent Garden y no recuerdo có mo, pero encontré una manera de entrar
allı́. Jimmy Macken y Wally me ayudaron a empujar la puerta y vaciar el
gar io en la furgoneta de Jimmy. Por lo general, preferı́a trabajar solo en
trabajos má s grandes. Siempre sentı́ que era má s probable que otras
personas lo estropearan porque no tenı́an la Capa.
Al igual que esa letra de Bowie que podrı́a citar despué s para
justi icar el robo de sus micró fonos, Tommy le habı́a dado un rehé n a la
fortuna llamando a una de sus tiendas anteriores Kleptomania. Añ os
má s tarde me lo encontré en la calle en Londres y le dije que lo sentı́a y
le pregunté si habı́a algo que pudiera hacer para enmendarlo. Tuvo la
amabilidad de decir que el seguro de ese robo realmente lo habı́a
ayudado porque estaba en un pequeñ o problema inanciero en ese
momento, por lo que todo estaba bien, lo que terminó bien en eso.
Ya que estoy en el tema de los delitos contra la moda, hay uno má s
que probablemente no pueda dejar de mencionar. Esto no fue un robo,
sino una apariencia real: mi fase de chico de A&R de la costa oeste,
cuando estaba a la caza de nuevos actos para salir de gira con Poco. No
recuerdo que haya sido cuando era amigo de Malcolm, porque creo que
le habrı́a dado dos pulgares hacia abajo, como hizo Jimmy Macken con
mi experimento progresivo. Por otra parte, McLaren era tan posesivo
que podrı́a haber pensado que era divertido. Y el hecho de que asocie
este look con la banda Ace y su canció n 'How Long' (que salió en 1974,
cuando estaba en la tienda de Malcolm como un ataque de verrugas
genitales) signi ica que tal vez lo probé mientras é l estaba fuera. en
Estados Unidos persuadiendo a los New York Dolls para que se vistieran
como comunistas.
Solo estaba tratando de convencer a la gente de que yo era alguien.
Mi estrategia para hacer esto en ese momento era llevar el pelo un poco
largo con una linda camisa hawaiana, jeans, botas vaqueras y una de
esas chaquetas de traje beige delgadas con un gran cuello que venden
lugares como Take 6. Me ponı́a ese atuendo y paseaba por King's Road
con un maletı́n robado y esperando parecer alguien de una compañ ı́a
discográ ica en Los Angeles. Fue extrañ o, de verdad. Dudo que hubiera
algo en el maletı́n. Glen cuenta una historia (que, de nuevo, no recuerdo,
pero como he dicho antes, é l no es de los que inventan cosas, a
diferencia de casi todos los demá s en este libro, excepto Cookie) acerca
de que una vez robé un maletı́n que tenı́a un montó n de en efectivo y
comprá ndonos tanto pastel y puré con las ganancias que apenas
podı́amos caminar por Hammersmith Broadway, ası́ que tal vez fue ese.
De cualquier manera, todo era otra fantası́a descarada inventada por
mı́ en un intento desesperado por llamar la atenció n. Simplemente
modi iqué la mirada y pensé : 'Voy a probar eso y ver qué pasa'. La triste
verdad era que no hacı́a mucho. Toda esa vibra se puso bastante de
moda durante un tiempo en el siglo siguiente, por lo que se podrı́a
(aunque yo no dirı́a) decir que estaba cuarenta añ os adelantado a mi
tiempo. Creo que ahora lo llaman 'rock de yate'. Realmente no me gusta
ese nombre, nunca se trató solo de los yates para mı́, fue má s una forma
de vida.
Dada la cantidad de riesgos que estaba tomando, era inevitable que
mi suerte se acabara algú n dı́a. El hecho de que no pueda recordar
exactamente por qué me mataron es probablemente otro ejemplo de
que mi memoria se cierra cuando la vida se vuelve demasiado difı́cil,
pero no creo que haya sido la Policı́a de la Moda quien inalmente me
encerró . Cualquiera que sea el cargo por el que estuve, encontrarme
golpeado en el centro de detenció n preventiva de Ashford en el verano
de 1974 fue un duro golpe. Ahora que tenı́a má s de dieciocho añ os y una
lista de condenas tan larga como el brazo de un jugador de baloncesto,
corrı́a un grave peligro de que me encerraran durante mucho tiempo en
una prisió n para adultos. No se trataba de un campamento de
vacaciones para boy scouts como lo habı́a sido Banstead Hall: se trataba
de un nick propio de los setenta, como en la serie de televisió n Porridge .
Yo era un delincuente habitual, ası́ que merecı́a estar allı́, pero no
querı́a estarlo. Era un lugar horrible . Solo estuve adentro durante unas
tres semanas, pero se sintió como un añ o. Alguien tenı́a una radio con
los 20 mejores y recuerdo haber pegado la oreja a la mirilla de la gran
puerta de metal para escuchar 'It's Only Rock 'n' Roll But I Like It' de The
Rolling Stones. No fue su mejor momento, pero sonaba muchı́simo má s
divertido de lo que yo estaba teniendo.
Si hubiera recibido la fuerte sentencia que probablemente deberı́a
tener, la banda casi seguramente se habrı́a separado, ya que yo era el
que no tenı́a nada má s por lo que vivir y estaba má s comprometido a
mantenerlo en marcha. Afortunadamente, para mı́, si no para la
industria de la mú sica, esta comparecencia ante el tribunal serı́a
diferente a las muchas anteriores, ya que ahora tenı́a a alguien que
habları́a por mı́ frente al juez. Dado el punto de in lexió n que fue en mi
vida, uno pensarı́a que tendrı́a un recuerdo má s claro de este drama
judicial. Sabiendo que sucedió , y pensando que la audiencia
probablemente fue en el Tribunal de Magistrados de Marylebone...
bueno, eso es todo. Nada.
Tuve la suerte de que habı́a alguien alrededor que estaba má s en
sintonı́a con lo que estaba pasando que yo. Ese alguien era Malcolm
McLaren, la primera persona que se habı́a preocupado lo su iciente por
mı́ como para involucrarse en mi vida a este nivel. Malcolm le dijo al juez
una frase tan brillante sobre el futuro brillante que tenı́a por delante y la
gran contribució n que iba a hacer a la sociedad britá nica que el tipo de
la peluca me soltó con una ú ltima advertencia. Si hubiera sabido lo que
realmente iba a pasar, me habrı́a encerrado y tirado la llave.
14. KUTIE JONES Y SUS PISTOLAS
SEXUALES
Despué s de que Malcolm se involucrara, solo hicimos un concierto
conmigo cantando. Eso fue todo lo que tomó para con irmar que ser el
lı́der no era mi bolsa. Tampoco era como si esto fuera un gran
espectá culo de presió n, solo una pequeñ a iesta para algunos niñ os ricos
que tomaban coca en Salter's Cafe en King's Road. Pero por lo mucho
que me estaba cagando, pensarı́as que era el jodido Royal Albert Hall.
Puede ser un poco molesto hoy en dı́a có mo todo se ilma y
documenta desde el principio, porque evita que todo se desarrolle por sı́
solo y pierdes el misterio de alguien que lo vio y te cuenta lo que
sucedió . Pero desearı́a que alguien hubiera ilmado ese concierto,
porque ver lo terrible que era hubiera sido jodidamente gracioso.
Despué s, Vivienne dijo que estaba 'cantando desde el fondo de mi
garganta'. No estoy muy seguro de lo que eso signi icaba, que Dios la
bendiga, pero creo que estaba tratando de ser amable. El problema no
era tanto mi forma de cantar (aunque eso ya era bastante malo) como el
hecho de que no tenı́a ni idea de qué hacer conmigo mismo en el
escenario.
Todavı́a no vestı́a ropa punk (creo que el look de lash-hippie-Poco-
A&R-man todavı́a funcionaba) y solo hicimos 'Scarface' y un par de
covers. Pero esos fueron diez jodidos y largos minutos, ciertamente lo
su iciente para que yo supiera que ser el tipo al que todos miraban no
era para mı́. Simplemente no es mi personalidad. Bueno, lo es, porque
me gusta la atenció n, pero solo hasta cierto punto. Soy una extrañ a
mezcla de extrovertido e introvertido ası́: una vez que el centro de
atenció n se vuelve demasiado brillante, solo quiero volver a joderme a
las sombras.
En cierto modo, lo mismo habı́a sucedido en la tienda, que para
entonces habı́a cambiado su nombre por el de Sex. El objetivo de ese
lugar era estar justo en la cara de todos, y Malcolm y Vivienne estaban
reclutando algunos personajes muy audaces para ayudarlos a transmitir
su mensaje. Obviamente, yo era uno de ellos; al menos, lo estaba cuando
tenı́a un par de tragos en mı́. Pero Pamela Rooke, tambié n conocida
como Jordan, que se habı́a unido a Chrissie en el piso del sex shop, era
otra cosa, hombre.
Era como si estuviera completamente formada desde el momento en
que llegó a la tienda. Ahora, me gustaba Jordan. Ella era una buena risa,
pero lo poco de mierda que daba casi me asustó . Se vestı́a tan
escandalosamente que casi me avergonzaba caminar por la calle con ella
porque todos nos estarı́an mirando. No era como si se cambiara para ir a
trabajar, y nadie tenı́a autos entonces, ası́ que al inal de su rutina diaria
se tambaleaba por King's Road y tomaba un autobú s de regreso al
campo o donde diablos. fue que ella vivió . ¡Tendrı́a sus tetas colgando en
el autobú s con todo este equipo de goma! Probablemente podrı́a ir a
trabajar a un banco con ese aspecto ahora, pero a principios de 1975 la
gente nunca habı́a visto algo ası́. Supongo que le encantaba la atenció n,
pero yo solı́a pensar: '¡Fó llame! Tiene cojones andando ası́.
Lo que Vivienne y Malcolm estaban haciendo con Sex estaba
aprovechando la sensació n que mucha gente tenı́a en ese momento de
simplemente querer que sucediera algo: la mú sica se habı́a vuelto tan
aburrida y Gran Bretañ a parecı́a tan jodidamente gris y aburrida. Si
nadie má s lo iba a hacer, ¿por qué no deberı́an hacer algo por sı́ mismos?
Los añ os sesenta eran noticia de ayer para entonces, y con el glamour a
punto de morir, qué mejor manera de causar un puto mal olor que cubrir
las paredes con citas pornográ icas y sacar del armario la ropa de goma
de los pervertidos y ponerla directamente en la puta calle principal. (o el
Camino del Rey, en este caso)? Sin gente como Jordan para poner sus
ideas en acció n, Sex, y tal vez tambié n el punk, habrı́an sido solo otra
conspiració n de la escuela de arte. Nunca hubiera salido de la mesa de
dibujo.
Se puso bastante raro en la tienda cuando todo el equipo de bondage
estaba allı́. Las cosas de goma no eran lo mı́o desde un punto de vista
sexual, simplemente no me hacı́an nada. Incluso má s tarde, cuando
Linda the Dominatrix se involucró con Sex and Sid y algunas de las otras
personas de la banda empezaron a pasar el rato en su mazmorra, nunca
me metı́ en eso.
Como habrá s notado, no soy un mojigato, pero incluso yo tengo mis
lı́mites, y algunas de las cosas que pasaban en Sex en ese momento me
sorprendieron incluso a mı́. Estarı́a allı́ con Chrissie o Jordan (nunca me
acosté con ella, en caso de que alguien se lo pregunte: Adam Ant resultó
ser má s su tipo) y tendrı́as a todos estos tipos MP con trajes a rayas
entrando a escondidas cuando se bajaron. trabajar. Entraban en el
camerino con un poco de lá tex y tenı́an un pedal allı́. Eso era como algo
comú n entre los pervy toffs. Supongo que lo aprendieron en la escuela
pú blica. Glen siempre se quejaba de tener que limpiar los luidos
corporales.
El sexo fue diseñ ado para ser una declaració n de moda, no una tienda
de fetiches, pero supongo que a esos cabrones no les importa dó nde lo
hacen. Si lo construyes, se correrá n. Nunca supe quié nes eran ninguno
de ellos hasta que la gente me lo dijo despué s: eran solo hombres con
maletines en lo que a mı́ respecta (a diferencia del que llevaba arriba y
abajo de King's Road, el de ellos en realidad tenı́a cosas dentro, incluso
si era solo vaselina y una má scara gimp), pero sı́ recuerdo que el locutor
Reginald Bosanquet estuvo presente algunas veces. Estaba
enormemente obsesionado con Jordan y, a veces, cuando leı́a las noticias
en la televisió n por la noche, le guiñ aba un ojo a la cá mara como un
có digo para mostrarle que llevaba pantalones de goma en su honor. En
té rminos de lo que Malcolm estaba tratando de lograr al mostrar el
establecimiento britá nico en sus verdaderos colores, ese fue
probablemente uno de sus momentos de mayor orgullo.
El ú nico grupo de personas que estaba incluso menos atada que yo
eran los Ted. Les encantaba pasar el rato en Let It Rock, pero se enojaron
mucho cuando dejó de tratarse solo de ellos. Hubo algunas escenas feas
en los primeros dı́as de Sex, y má s tarde todo el asunto de Teds vs punks
se convirtió en violencia real: varias personas dentro y alrededor de los
Pistols, incluida Cookie, serı́an acribilladas o apuñ aladas por Teds en un
momento u otro. . (Tuve suerte: escapé de una lesió n con la ayuda de la
capa). Esa violencia tendı́a a verse como un tipo de mods vs rockers
pasados de moda, pero en realidad era má s especı́ ico que eso. Los Ted
odiaban a los punks porque pensaban que los punks habı́an robado su
tienda, y probablemente tambié n sintieron que Malcolm los habı́a
traicionado. Obviamente, no fueron las ú ltimas personas en sentirse ası́.
No tuve que modelar ninguna de las prendas de goma una vez que la
banda estuvo a la vista del pú blico. Malcolm y Vivienne nunca nos
dijeron que usá ramos nada en particular, solo nos servı́amos lo que
querı́amos y luego nos lo cobraban o no. Sin embargo, me gustaban las
camisetas: las tetas y los jó venes desnudos fumando cigarrillos y la
má scara de violador de Cambridge y los vaqueros con la polla afuera.
Entendı́ que el objetivo de eso era impactar a la gente. Glen y Bernie
Rhodes se ofendieron con algunos de ellos, pero yo nunca.
No sabı́a cuá l era el trato de Malcolm, sexualmente. Tuve la sensació n
de que habı́a tenido algunos encuentros homosexuales, pero nunca sentı́
que eso fuera lo que lo impulsaba. El y Vivienne eran como una pareja
adecuada, pero la vibra entre ellos no era muy sexual. En teorı́a, a
McLaren le gustaban todas las cosas terrenales y elementales, pero en su
mayorı́a eran bravatas. No se trataba de una experiencia real.
A veces, cuando hacı́a cosas, se sorprendı́a y se reı́a como un colegial.
Supongo que por eso nunca lo tomé demasiado en serio en esa á rea.
Incluso cuando bromeaba con mierda de pornografı́a infantil, que
supongo que podrı́a haber relacionado con experiencias por las que
habı́a pasado y encontrado molesto, nunca me molestó . Probablemente
por la misma razó n por la que nunca lo pensé dos veces antes de usar
ropa con esvá sticas, porque en ese momento me parecı́a má s importante
agitar un poco las cosas que preocuparme por herir los sentimientos de
otras personas.
La primera vez que apareció el nombre 'Sex Pistols' fue en una de
esas camisetas. Creo que Malcolm, Vivienne y Bernie lo diseñ aron juntos
y la idea era que fuera una especie de mani iesto, por lo que un lado
decı́a 'Hates' y el otro lado 'Loves' y el eslogan en la parte superior decı́a:
'You're me despertaré una mañ ana y sabré en qué lado de la cama te has
acostado...' Habı́a largas listas de cosas que debı́an gustarte y no
gustarte; no habı́a oı́do hablar de la mayorı́a, para ser honesto, y Creo
que fue una cuestió n de tratar de obtener una vibra de 'Nosotros contra
ellos' má s que nada especı́ ico. De todos modos, ahı́ en medio de los
'Loves' estaba 'Kutie Jones y sus SEX PISTOLS'.
Obviamente, estaba feliz de ser un Kutie, pero no estaba muy seguro
del elemento SEX PISTOLS. Simplemente sonaba un poco gay . No era la
idea de que la gente pensara que está bamos abrochados lo que me
molestaba; como he dicho, no tenı́a preocupaciones sobre mi sexualidad,
porque amaba a los pá jaros y en ese momento estaba follando con
tantos que era como un paseo. dildo – era má s lo que la elecció n de ese
nombre dirı́a sobre la banda. Segú n recuerdo, al ú nico de nosotros a
quien realmente le gustó al principio fue a Wally, lo cual fue un poco
cruel ya que estaba saliendo para entonces.
Malcolm me habı́a estado insistiendo durante un tiempo para que me
tomara la guitarra un poco má s en serio. Al principio creo que era solo
para darme algo que hacer con mis manos para que no me viera tan
idiota en el escenario. Pero luego comencé a entenderlo bastante rá pido
al ver lo que estaba haciendo Wally. Todavı́a no tenı́a idea de que
terminarı́a siendo el guitarrista; simplemente me empujaron en esa
direcció n y milagrosamente funcionó . No quiero ponerme
completamente new-agey, pero es divertido có mo las cosas encajan a
veces. Al igual que con Iggy Pop: al principio era el baterista de su banda,
luego, de repente, se convirtió en el lı́der porque ası́ era como debı́a ser.
Fue cuando Malcolm regresó a Inglaterra de su puto accidente
automovilı́stico cuando intentaba ser el má nager de los New York Dolls
en Estados Unidos cuando realmente comenzó a impulsarme en el
frente de la guitarra. Deberı́a haber tenido el rabo entre las piernas, pero
creo que ese fracaso hizo que tuviera má s ganas de involucrarse con
nosotros, porque ahora tenı́a algo que demostrar. Me compró la Gibson
Les Paul blanca de Sylvain Sylvain con la pegatina de pin-up. Creo que la
banda se la dio en lugar del dinero que le debı́an, o tal vez se la robó , no
estoy seguro. De cualquier manera, a pesar de que amaba a los New York
Dolls, esto no me pareció un gran problema en ese momento. Sabı́a que
una Les Paul era la mejor guitarra para el rock 'n' roll, y algunas de ellas
ya habı́an pasado por mis manos para entonces; No estaba como, 'Oh,
gracias, Dios, la llama sagrada'.
Malcolm probablemente habló un poco de este evento a lo largo de
los añ os porque lo hizo parecer como Merlı́n obteniendo la espada para
el Rey Arturo. ¿ La idea de traer a alguien de Estados Unidos para que
fuera el nuevo cantante de la banda, uno de los Dolls, Richard Hell,
Gladys Knight? No sé quié n cojones se suponı́a que era, fue otra de sus
jugadas maestras de gestió n imaginarias de las que se habló
desproporcionadamente. McLaren fue conocido por cambiar los hechos
para que se ajustaran a su versió n de los hechos posteriores; era algo
por lo que era realmente conocido.
Otro a quien le gustaba destacarse un poco má s cada vez que contaba
una historia era el periodista de NME Nick Kent. Supongo que todos
quieren una parte del mito. Malcolm habló mucho sobre hacer las cosas
de una manera diferente a otras bandas, pero desde el principio siempre
estuvo muy interesado en mantenerse al dı́a con la prensa musical, y
cuando apareció Nick Kent, que era un escritor de rock muy conocido en
ese momento. a Riverside Studios un par de veces, asumimos que era
solo para ponerlo de lado. Fue solo añ os despué s que supimos lo cerca
que habı́amos estado de tener a uno de los grandes genios musicales del
siglo XX en nuestras ilas.
Nick sabı́a algunos acordes. Me impresionó mucho una a inació n
abierta en G que me mostró , lo que hizo que tu forma de tocar la guitarra
sonara un poco como la de Keith Richards. El ú nico problema era que la
adicció n de Nick a Keith Richards estaba totalmente fuera de control. Se
paraba allı́ haciendo su pose de Keith Richards, su cuerpo todo
descuidado, como el de su hé roe. Que era una broma. Si Keith hubiera
pasado y lo hubiera visto, habrı́a dicho: '¿Qué diablos está s haciendo,
hombre?' … poco antes de pedirme que le devolviera su puto abrigo.
Nick Kent salió con Chrissie por un tiempo. Estaba muy celoso
(probablemente por una buena razó n, para ser honesto) y entró en Sex
para ser un capullo con ella una vez. Dejó de trabajar allı́ despué s de eso,
lo cual fue una pena, en lo que a mı́ respecta, ası́ que hubo un poco de 'lo
que va, vuelve' cuando Sid lo atacó en el 100 Club un tiempo despué s.
Sin embargo, todo eso todavı́a estaba muy por delante de nosotros en
este punto.
Por el momento, nuestro mayor problema era qué hacer con Wally.
Antes de irse a Nueva York con los Dolls, Malcolm ya nos habı́a estado
diciendo que deberı́amos darle el empujó n. Fue duro, pero tenı́amos que
hacerlo. En retrospectiva, deshacerse de Wally fue absolutamente lo
mejor que se podı́a hacer. No se veı́a bien, para empezar. No digo que
fuera un tipo feo, pero digamos que carecı́a de la estructura ó sea clá sica
de algunos otros miembros de la banda. Ademá s, usaba anteojos, lo cual
no es aceptable en un guitarrista de rock 'n' roll. No me culpes, yo no
hago las reglas.
Una cosa que sabı́a con certeza era que la banda no irı́a a ninguna
parte sin mı́. En ese entonces era prá cticamente un vagabundo y la
mú sica era todo lo que tenı́a. Aparte de robar y el sexo, era lo ú nico en
mi vida en lo que habı́a invertido algú n tipo de energı́a constante.
Entonces, si no iba a cantar, iba a tocar la guitarra, eso era todo lo que
habı́a que hacer. eso. Algo tenı́a que pasarnos, joder, incluso si aú n no
sabı́amos exactamente qué era.
Habı́a cosas para que rebotá ramos, como Futurama , el segundo
á lbum de Be-Bop Deluxe, un gran favorito tanto para mı́ como para
Cookie en ese momento. Bill Nelson fue un gran guitarrista que
realmente hizo que Bowie mirara hacia abajo cuando lo vimos en vivo en
el Fulham Greyhound. El pub rock tambié n estaba llegando con má s
fuerza en ese momento. Recuerdo haber visto al Dr. Feelgood en el
Kensington, ese lugar era solo un boozer con un pequeñ o escenario al
inal. Tambié n habı́a una banda llamada The Winkies en la que ya nadie
piensa mucho y yo pensaba que eran bastante buenos. Tocaron en esa
canció n de Brian Eno, 'Seven Deadly Finns', y tenı́an a un guitarrista que
pensaba que era Keith Richards, pero tenı́a un poco má s para respaldar
esa fantası́a que Nick Kent. Recuerdo que lo miré tocando su Les Paul
negra a travé s de un ampli icador Ampeg y pensé : 'Tal vez podrı́a hacer
eso'.
Deben haberme gustado, porque no seguı́ su Ford Transit despué s de
que cargaron todo su equipo al inal del concierto y robaron su equipo.
Otros no tuvieron tanta suerte. En general, cuando mirabas a la
competencia, no habı́a nada que realmente asustara a nadie. Ese iba a
ser nuestro trabajo. Todo lo que necesitá bamos ahora era un cantante.

Ñ Ó
15. EL NIÑO MIRÓ A JOHNNY
A Malcolm le gustaba exagerar lo cerca que estuvieron Richard Hell o
Sylvain Sylvain de unirse a la banda, pero habı́a un plan para importar
un vocalista que casi sucedió . La fuente estaba mucho má s cerca de casa,
pero igual de improbable que el canaló n fuera del CBGB. Era Escocia,
donde Midge Ure, que terminarı́a haciendo Band Aid nueve añ os
despué s, cantaba con una banda de segunda divisió n al estilo Bay-City-
Rollers llamada Slik.
Malcolm y Bernie se convencieron a sı́ mismos de que Midge era el
tipo, hasta el punto de viajar hasta Glasgow para encontrarse con é l,
pero cuando llegaron acababa de irmar un contrato discográ ico, ası́
que no habı́a nada que hacer. Al inal, la broma fue para é l, porque
terminó formando parte de la banda de Matlock, The Rich Kids, antes de
unirse a Ultravox. Buena suerte, Midge, y nos vemos en el Saló n de la
Fama del Rock & Roll... o tal vez no.
Cuando se trata de la mecá nica de có mo John Lydon inalmente llegó
a ocupar nuestra vacante en forma de cantante, ese es otro evento
traumá tico en mi vida en el que mi memoria se echa a perder un poco.
Ası́ que he decidido, ya que é l está muerto ahora y no puede cobrarme
(creo que todavı́a me debe, de todos modos), usar la cuenta que Malcolm
me dio cuando vino a mi programa de radio en 2005. El solo estaba
dando vueltas en Los Angeles en ese momento, no estoy seguro de lo
que estaba haciendo, pero me topé con é l un par de veces desde el caso
judicial dos dé cadas antes, y nunca hubo mala sangre entre nosotros
dos. , por lo que la entrevista parecı́a algo natural. Para ser honesto, no
parecı́a un gran problema en ese momento. Fue solo despué s de su
muerte, unos añ os má s tarde, que comenzó a sentirse de esa manera, y
ahora estoy muy contento de haberlo hecho.
Nadie puede negar que Malcolm es un gran narrador, y aunque a
veces deberı́a haber respaldado su licencia poé tica, esta versió n de lo
que sucedió coincide bastante con los fragmentos ocasionales que
puedo recordar. Debo agregar a cualquiera que lea esto en voz alta que
tambié n hizo una muy buena impresió n de Vivienne; aú n puedes
escucharlo si miras la entrevista en YouTube.
“Así que nos quedamos con este nombre, Kutie Jones, ese eras tú, y sus
Sex Pistols, ese era el resto: Cook, Matlock, cualquier otra persona que
pudieras agarrar y poner en la banda. No te estaba yendo muy bien, así
que se decidió, creo que en cierto momento en el auto que regresaba de
Brighton, que haríamos una audición para un cantante. Iba a pararme
en la tienda todos los días y ver entrar a la gente, y como resultado
varias personas fueron audicionadas. El tipo que terminó siendo el
cantante principal de The Damned, y este grupo llamado The London
SS, que era el grupo en el que estaba Mick Jones antes de The Clash: se
buscaron posibles cantantes, se consideró a Chrissie Hynde en un
momento …
No encontramos a nadie, al menos yo no. Pero Vivienne seguía
diciéndome: "Cuidado con este tipo llamado John: es muy guapo y es
muy interesante en la forma en que usa su ropa". Estaba sentado en la
tienda buscándolo cuando entró un tipo, una criatura muy, muy
escandalosa, que buscaba un par de zapatillas de burdel de gamuza
blanca. No los tenía en su talla… pero se los podía encargar la semana
siguiente. Le pregunté, como le preguntaba a todos los que entraban en
la tienda en ese momento: "¿Tú cantas?" y él dijo: "No, solo
desa inado". Pensé: "Está bien, te pondremos a prueba". Le dije: "Si
quieres estos zapatos, incluso puedo dártelos si me prometes ir a este
pub a la vuelta de la esquina llamado Roebuck, donde puedes
encontrarte con el resto de la banda esta noche".
"Lo hizo, y típicamente de su carácter apareció con un grupo de
amigos que incluso entonces probablemente pensó que eran sus
guardaespaldas porque no quería llegar a ningún lado solo". Me senté
en el bar a hablar con algunos de los personajes locales (víctimas de la
moda, víctimas de las drogas) y te dejé continuar. Luego viniste y
dijiste: "Mira Malcolm, si sigue gritándome, lo voy a golpear hasta la
mierda". Tienes que llevarlo a la tienda ahora, porque realmente no sé
si queremos involucrarnos con este tipo”.
Así que me acerqué y lo arrastré hasta la tienda. En ese momento me
volví muy entrometido y agarré, no sé por qué lo teníamos, un
dispositivo de ducha roto que podía comportarse como un micrófono.
Se lo di a John y le dije que se parara al inal de la tienda. Entonces yo
puso una canción en la máquina de discos, creo que era "Dieciocho" de
Alice Cooper, y dijo: "Compórtate como si estuvieras en el escenario y
canta, de lo contrario, este tipo que está sentado a mi lado ahora, Steve
Jones, va a sacarte la luz del día a golpes.” Luego, tú y Paul Cook y creo
que Glen, el chico de los sábados que se convertiría en el bajista, se
quedaron atrás junto a la máquina de discos mientras todos veíamos a
John actuar.
'Recuerdo que empezó a parecerse al Jorobado de Notre Dame. Sacó
un pañuelo y se sonó la nariz, estaba escupiendo y tosiendo y hablando
de “el sexo en el pasto es gratis”, no sé, Dios sabe de qué estaba
hablando pero estaba tratando de imitar y gritar. Estaba algo
avergonzado, vulnerable y extraño. Me reí porque pensé que era
realmente divertido y brillante. Paul Cook dijo: “Será mejor que vuelva
a la cervecería y siga con mi trabajo”, pero siempre fue así. Fuiste junto
con eso. Creo que acabas de pensar, "¿Por qué no?"
“De repente los puse a todos en una sala de ensayo en algún lugar de
Rotherhithe. Eso fue lo que pasó la semana siguiente, excepto que él
apareció y ustedes no. Tal vez no estabas seguro de él, no lo sé. De
cualquier manera, luego se cabreó y se quedó en casa... inalmente lo
convencimos de volver a la banda sobre la base de que ibas a ponerte
muy serio y ensayar con él. Fue entonces cuando dejamos a Kutie Jones
y se convirtió en Sex Pistols... asesinos jóvenes y sexys, eso erais, e ibais
a competir con los Bay City Rollers.
'Esa era la idea, porque estaban en la cima de las listas en ese
momento: eran los niños núbiles, jóvenes y atractivos. Llegabas con un
ángulo muy diferente: mucho, mucho más vanguardista... menos un
sonido pop, pero más algo que iba a ser completamente nuevo, más un
sonido que realmente lastimaría y molestaría a la gente, un sonido del
que sería despojado. toda su destreza.
Recuerdo que Malcolm dijo eso sobre los Bay City Rollers. Tam Paton, el
tipo muy só rdido que dirigı́a a los Rollers, fue condenado a muerte unos
añ os má s tarde, aunque salió libre de otra serie de cargos cuando el
guitarrista rı́tmico Pat McGlynn lo acusó de violació n. No creo que los
jodiera a todos, pero lo que sea que sucedı́a en esa banda ciertamente no
era lindo , podı́as verlo en sus rostros a medida que envejecı́an. La
cantante de initivamente no envejeció con gracia, pero no todos tienen
la suerte de tener mi buena apariencia clá sica.
Avance rá pido de nuevo a nosotros hablando en mi programa de
radio. Nos detuvimos para una pausa comercial y Malcolm dijo que
habı́a olvidado un poco, luego agregó lo siguiente, que de initivamente
tenı́a un poco de verdad, aunque ese grano ciertamente no era má s
grande que la pizca de sal con la que probablemente deberı́as tomarlo.
"Lo que olvidé fue que cuando inalmente se formaron los Sex Pistols,
volví a ver a Vivienne y le dije: 'He encontrado a John y va a estar bien.
Tenías razón, Vivienne'". Ella dijo: “Iré a Chelsea y tomaré una copa
con él. Me gustaría conocerlo porque es un chico muy guapo”. Llegó al
pub de King's Road y vino a verme al bar. Ella dijo: “Ese no es el John
del que pensé que te hablé, es otro John. Tienes al tipo equivocado. Dije:
“Él es OK, está bien, tiene algo”. Luego ella respondió: “Vas a tener
muchos problemas con él, nunca escucharás lo último de esto. ¡Oh,
bueno, has hecho tu cama, así que vas a tener que acostarte en ella!
'En ese momento ella salió del pub. El John del que hablaba entró en
la tienda unas semanas después. Su nombre, por supuesto, era John
Simon Ritchie y luego se convirtió en Sid Vicious. Quería unirse al
grupo desde el principio: dijo que podía tocar el saxofón. Le dije: "No
necesitamos un saxofón, tenemos su icientes personas en el grupo, está
bien". Entonces, en cambio, se convirtió en el agente provocador e
inventó el pogo.
La forma en que estas cosas funcionan a veces te hace preguntarte si
Dios era un rockero punk o si las cosas simplemente suceden como
suceden. El momento ciertamente funcionó bastante bien con Matlock
arrastrá ndose fuera de la carpinterı́a de 430 King's Road, yo siendo
lanzado a la guitarra solista y comenzando a aprender muy rá pido, luego
apareció John, y fue como 'aquı́ está nuestro chico'. La banda era una
gran combinació n y el hecho de que ninguno de nosotros, excepto
Cookie y yo, nos llevá ramos demasiado bien fue una gran parte de eso,
porque las brechas entre nosotros eran lo que la mú sica provocaba. No
hay una fó rmula para saber có mo suceden estas cosas. Mira a The
Beatles: se deshicieron del apuesto baterista y metieron a Ringo, y eso
no funcionó tan mal.
Fui yo quien terminó bautizando a John como 'Rotten' debido al
terrible estado de sus dientes, y eso me quedó un poco pegado, pero lo
habı́a visto llegar a Sex varias veces antes de la audició n y pensé que se
veı́a jodidamente genial. Era uno de esos tipos que simplemente tienen
algo. Lo mismo sucedió con Sid, a quien tambié n habı́a notado
merodeando por la tienda varias veces antes de que John se uniera a la
banda; presumiblemente fue entonces cuando Vivienne lo ichó . Siempre
se veı́a fantá stico, tambié n. Los veı́as a los dos caminando por King's
Road y parecı́a que ya eran estrellas, aunque nadie sabı́a quié nes eran
todavı́a.
No era solo la apariencia de John lo que te atraı́a de é l: el cabello
teñ ido de verde y los imperdibles (mucho antes de que Vivienne
comenzara a usarlos) y la camiseta "Odio a Pink Floyd" que é l mismo
habı́a destrozado, tambié n tenı́a un gran cara Eso puso en juego todos
los demá s elementos: su excelente estructura ó sea. Y muchas de las
cosas que luego se convertirı́an en el uniforme punk, parecı́a que é l las
hizo primero. Obviamente habı́a un poco de cabello puntiagudo con
Bowie, pero eso era má s una cuestió n de glamour, mientras que con
Rotten todo estaba en un nivel de há galo usted mismo, que fue lo que
realmente lo hizo destacar.
Má s tarde verı́a fotos de Richard Hell haciendo cosas similares un
poco antes, pero no creo que Rotten haya visto esas fotos, y te garantizo
que si le preguntas, te dirá que no. Tal vez si estaba pensando de cierta
manera sobre có mo era el mundo a principios de la dé cada de 1970, ese
era un estilo natural para comenzar a vestirse. De cualquier manera, fue
un gran aspecto.
Los estadounidenses que a irmaban que empezaron todo se
volverı́an bastante tediosos a medida que avanzaba el punk. Los
muchachos de Nueva York de initivamente tramaban algo, pero era
diferente a lo que está bamos haciendo. Por supuesto que habı́amos sido
in luenciados por The Stooges y New York Dolls, pero no má s que por
Roxy Music o The Faces. Y recuerdo que escuchamos por primera vez el
disco de los Ramones cuando ya está bamos ensayando. Ciertamente no
los vimos y pensamos, 'Oh, tenemos que ser como esta banda ahora'. Lo
gracioso fue que me hice amigo de Johnny Ramone un tiempo despué s y
recuerdo a este tipo, un periodista llamado Legs McNeil, que era el lı́der
de la brigada 'Oh, nosotros, los estadounidenses, llegamos primero':
Johnny odiaba absolutamente a ese tipo. No querı́a tener nada que ver
con é l o su mierda.
Sin embargo, volvamos al otro John. Tanto Malcolm como Glen solı́an
quejarse de que siempre tenı́a que tener a su pandilla de amigos con é l,
pero los ú nicos que realmente recuerdo que trajo en los primeros dı́as
fueron una chica de su universidad cuyo nombre no recuerdo y John
Grey, que era má s un chico de la escuela de arte. Rotten nunca apareció
con sus compañ eros de Arsenal, aunque sabı́a que tenı́a algunos porque
eso era lo que les gustaba a sus hermanos.
Hubo un poco de antagonismo entre é l y yo desde el principio, pero
no tanto como insinuó Malcolm (todavı́a está haciendo lo de divide y
vencerá s, incluso desde má s allá de la tumba). Fue solo la forma en que
se comportó en la audició n lo que me molestó . Pensé que no se estaba
tomando todo el asunto en serio y me molestó que no intentara cantar
para conseguir el concierto. En retrospectiva, el hecho de que querı́a que
é l hiciera un esfuerzo: 'Está bien, mué stranos lo que tienes en cuanto a
ser cantante', fue la razó n por la que yo no era el hombre adecuado para
el trabajo y é l era el indicado. una. Porque todavı́a era de esa escuela de
tratar de ser como Rod Stewart, mientras que é l tenı́a razó n al tomar el
pelo, porque eso es Rotten en pocas palabras, y eso era exactamente lo
que necesitaban los Sex Pistols.
Ademá s del hecho de que era mi banda y é l entraba desde afuera,
John probablemente estaba un poco intimidado porque yo era
fı́sicamente má s fuerte. Para compensar eso, usaba su intelecto para
menospreciarme mucho, lo cual podı́a hacer porque era muy inteligente
mientras que yo no era el má s brillante de los niñ os y nunca habı́a
aprendido nada en la escuela. Todavı́a lo hace ahora, pero
afortunadamente para mı́, he llegado al punto en que ya no me ofendo
má s. Dice tantas cosas que si alguien má s las dijera probablemente
herirı́a mis sentimientos, pero viniendo de John es como, 'Oh, es solo é l'.
No sé si é l y Malcolm alguna vez se gustaron mucho. Desde luego,
John no tenı́a el mismo tipo de relació n con é l que yo: siempre estaba
abierto a las sugerencias de Malcolm y querı́a saber qué harı́amos a
continuació n, mientras que desde el principio é l y John eran má s como
rivales. Creo que posiblemente eran demasiado similares, y Rotten
probablemente lo descubrió desde el principio como un poco tonto, lo
que por supuesto era Malcolm, pero ya sabes lo que dicen: se necesita
uno para conocer uno.
Por diferente que sea su mú sica, todas las bandas son bá sicamente
iguales. La razó n por la que todavı́a, hasta el dı́a de hoy, me encanta ver
documentales sobre bandas como los Eagles (sé que té cnicamente son
solo Eagles, pero eso parece estú pido escrito) es que puedo
relacionarme totalmente con ellos. Las personalidades involucradas y
las razones de las tensiones entre ellos nunca parecen cambiar.
El cantante, porque ese trabajo requiere el tipo de persona que
quiere estar al frente diciendo: 'Mı́rame, mı́rame', casi siempre será muy
inseguro y, por lo general, un poco idiota. Luego está el guitarrista, que
quiere tener todo el coñ o, y siempre hay al menos un extrañ o
introvertido en la banda. Para mı́, en los Pistols, fue Cookie. Es bastante
inusual que esa persona sea el baterista, pero eso fue bueno para
nosotros, porque los bateristas son los que tienden a desmoronarse.
Creo que es porque a nadie le importan una mierda y simplemente está n
sentados en la parte de atrá s. Les llega despué s de un tiempo, de la
misma manera que les pasa a los porteros en el fú tbol.
Una cosa de nuestra banda que fue ú nica fue la forma en que la
tienda de Malcolm y Vivienne nos unió a todos. Desde mı́ y, en menor
medida, Cookie pasando el rato allı́ porque realmente no tenı́a otro lugar
a donde ir, Matlock siendo el chico de los sá bados, John entrando allı́ en
busca de sus enredaderas de burdel: el sexo era la meca que atraı́a a
todos. Si ı́bamos a llevar esa vibra al mundo, necesitá bamos encontrar
un lugar al que nuestra mú sica pudiera llamar hogar de la misma
manera.
Nuestros primeros intentos de encontrar espacios de ensayo nunca
iban a cumplir con ese requisito. Primero hubo un basurero hippie al sur
del rı́o en Rotherhithe al que Rotten nunca ha dejado de quejarse de que
no ı́bamos. Luego estaba el Rose and Crown en Wandsworth, solo un
pub que un forastero pretendı́a que era un estudio de ensayo. No habı́a
ningú n tipo de insonorizació n, por lo que no recibı́as má s que quejas, y
estaba en una rotonda, se sentı́a como si estuvieras practicando en
medio de la calle. Todo sobre ese lugar era deprimente: llegar allı́,
con igurar todo el equipo. Fue horrible y lo odié . De hecho, me marcó de
por vida en lo que respecta a los ensayos...
Bueno, esa es mi excusa de todos modos.

Í
16. LA CALLE PRÍNCIPE DE DINAMARCA
Esas primeras semanas despué s de que Rotten se uniera a la banda en
agosto de 1975 fueron una verdadera ná usea. Habı́amos perdido todo el
confort y la comodidad de Riverside Studios en el momento en que
Wally fue expulsado, ası́ que cada vez que querı́amos practicar, tenı́amos
que conducir por las casas de todos y cargar una camioneta alquilada
con todo el equipo que habı́a robado: mi shag-wagon ya no era lo
su icientemente grande. Glen, Cookie y yo tendrı́amos que pasar un par
de horas prepará ndolo todo. Si Rotten apareció durante un par de horas
en el medio, eso fue lo mejor que pudo. Luego tendrı́amos que perder un
par de horas má s bajando todo el equipo, cargá ndolo de nuevo en la
furgoneta y inalmente deshacié ndonos de la furgoneta de nuevo
despué s de llevar las cosas de vuelta a donde las escondié ramos. El
trá ico en Londres no era tan malo entonces como lo es ahora, pero
seguı́a siendo una puta pesadilla.
Por suerte, probablemente en el ú ltimo momento, mirando hacia
atrá s, Glen vio un anuncio que este tipo que solı́a organizar giras para
Bad inger habı́a puesto en el perió dico para alquilar un espacio de
ensayo en 6-7 de la calle Dinamarca. Estaba justo en el corazó n del viejo
Tin Pan Alley, donde estaban todas las tiendas de guitarras. Malcolm le
prometió un montó n de dinero, que puede que inalmente le haya dado
o no. Espero que lo haya hecho, porque era un tipo muy agradable. Su
nombre era Bill Collins, y hace poco descubrı́ que era el padre de Lewis
Collins de The Professionals , lo cual fue una divertida coincidencia,
porque ası́ es como Cookie y yo terminarı́amos llamando a nuestra
pró xima banda unos añ os má s tarde.
Las cosas se habı́an ido a la mierda para Bad inger debido a un
montó n de tonterı́as de la compañ ı́a discográ ica. Uno de ellos se suicidó
unos meses antes de que nos mudá ramos y su mejor amigo en la banda,
que encontró su cuerpo, harı́a lo mismo unos añ os despué s. Solı́a
preguntarme si el primer tipo habı́a hecho la escritura en la calle
Dinamarca y por eso tenı́amos el lugar barato, pero al parecer se ahorcó
en su garaje en Surrey. De cualquier manera, fue un mal viento lo que
llevó a los Sex Pistols a un montó n de cosas buenas. No solo tenı́amos un
lugar justo en el medio de la ciudad donde podı́amos dejar nuestro
equipo instalado todo el tiempo, sino que en realidad tenı́a un jodido
lugar para vivir.
Por supuesto, nadie estaba destinado a vivir allı́, pero nunca hubo
ninguna duda de que yo lo harı́a. Habı́a estado jugando en los sofá s de la
gente por mucho tiempo y difı́cilmente iba a dejar pasar la oportunidad
de tener un lugar que pudiera llamar mı́o. Habı́a una librerı́a en la parte
delantera y pasabas por allı́ y subı́as unos escalones, salı́as al patio
abierto y luego entrabas en este extrañ o edi icio cuadrado en la parte de
atrá s que tenı́a un piso de abajo, donde estaba todo nuestro equipo, y un
piso de arriba que no era un espacio habitable cuando llegamos allı́,
pero pronto lo convertı́ en uno. Ya habı́a un calentador de agua Ascot y
puse una cama y un pequeñ o televisor en blanco y negro y, en general, lo
arreglé todo. Eh voilá – chez Steve.
Me encantaba estar en la calle Dinamarca. Es probablemente mi lugar
favorito en el que he vivido. Estaba justo en el West End, en medio de
toda la acció n. Solo tenı́as que salir por la puerta principal y todos los
jefes estarı́an allı́. ¡Estaba viviendo el sueñ o!
Tambié n habı́a un silencio absoluto allı́ por la noche, por lo que
incluso podı́as dormir muy bien. Creo que a John le molestaba que
tuviera mi propio lugar en medio del Soho, pero estaba bien para é l:
todavı́a vivı́a en casa con su mamá y su papá . De todos modos, a veces
solı́a quedarse arriba: Cookie tuvo una pelea con é l allı́ arriba, al igual
que Glen, cuyos padres se habı́an mudado a los suburbios distantes, por
lo que le resultaba má s difı́cil llegar a casa de lo que solı́a ser,
especialmente una vez que comenzó . en la escuela de arte de St Martin
justo al otro lado de la calle. Chrissie tambié n solı́a venir y quedarse a
dormir algunas veces, pero obviamente no se trataba tanto de dormir.
Tambié n hubo un perı́odo en el que estaba dando vueltas en
Ladbroke Grove con este pá jaro con grandes tetas, no el que solı́a subir
al escenario con Hawkwind, una chica motera diferente con la que tenı́a
una pequeñ a cosa. Ella era una grasienta adecuada y comprá bamos la
velocidad de Lemmy y nos acechá bamos en esos borrachos de
Portobello Road donde solı́an pasar el rato Pink Fairies y Hawkwind y la
gente que se convirtió en Motö rhead.
Esa es una parte del oeste de Londres que mucha gente asocia con
buenos momentos, pero nunca me ha gustado mucho. Aunque mientras
estamos en Notting Hill, probablemente deberı́a mencionar mi cameo no
acreditado en una pelı́cula que se rodó allı́ por esa é poca. Es una pelı́cula
de gá ngsters britá nica llamada The Squeeze en la que aparecen Stacy
Keach y el comediante Freddie Starr, y en un momento temprano puedes
verme caminando por el mercado de Portobello con una camisa
hawaiana (la ú nica aparició n del look de hombre de la Costa Oeste de
A&R). en celuloide). Cookie lo vio por casualidad en la televisió n
nocturna una vez y casi se cae de su jodido sofá . De todos modos, estoy
divagando.
Este pá jaro con el que me estaba tirando vivı́a en una casa okupa en
Ladbroke Grove con todos estos tipos motociclistas. Cuando iba por ahı́
recuerdo haber pensado 'A la mierda con esta mierda'. Esta no es mi taza
de té en absoluto. Obviamente, todo el estilo de vida okupa se asociarı́a
mucho con el punk má s tarde, pero no era mi escena de ninguna
manera. Estaba sucio, las casas siempre eran agujeros de mierda, y la
miseria me deprimı́a mucho.
Necesito que mi entorno sea de cierta manera: me gusta estar
ordenado y me gustan las cosas bonitas. No quiero estar durmiendo en
un lugar donde no sabes lo que va a pasar de un dı́a para otro. Incluso el
hecho de que fuera ilegal no lo era para mı́. Supongo que si eres un
infractor de la ley tan prolı́ ico como yo, no querrá s que tu casa sea otra
posible entrada en tu siempre creciente hoja de antecedentes penales.
Sé que té cnicamente lo que estaba haciendo en la calle Dinamarca era
okupar, pero no lo hubieras notado al mirar el lugar. Soy muy organizado
y limpio por naturaleza, supongo que es la moda en mı́.
Ademá s de mi primer hogar adecuado como adulto, Denmark Street
me dio algo má s que realmente necesitaba, que era un lugar para
practicar la guitarra. Cuando no tienes dó nde moverte aparte de los
sofá s de tus compañ eros, las oportunidades para mejorar tus acordes de
barra son pocas y esporá dicas. Enchufar tu Gibson Les Paul y tocar junto
a The Stooges' Fun House no tiende a caer muy bien con las mamá s y los
papá s. Ahora que inalmente tenı́a un lugar propio, podı́a tocar 'TV Eye'
y 'Dirt' al contenido de mi corazó n y en cualquier volumen que quisiera.
El primer á lbum de los New York Dolls fue mi otro favorito para tocar,
porque era simple y podı́a entenderlo, era perfecto para aprender.
Tocaba la guitarra solo literalmente durante horas en el piso de
arriba de la calle Dinamarca, solo para descubrir có mo funcionaba. Si te
está s preguntando có mo alguien con TDAH total y la capacidad de
atenció n de un maldito mosquito logró concentrarse el tiempo su iciente
para convertirse en el 97º mejor guitarrista de rock de todos los tiempos
de la revista Rolling Stone , la respuesta es muy simple: velocidad. No el
sulfato, sino las pastillas para adelgazar que te recetan los mé dicos.
Algunas personas los llaman bombarderos negros, otros los llaman
bellezas negras, pero de cualquier manera, será mejor que te tomes un
montó n de Mandrax para tomar despué s si alguna vez quieres dormir.
Malcolm era muy faná tico de querer que todos fueran delgados para
que la banda se viera bien, y creo que ası́ fue como lo persuadı́ para que
me conectara . Me enviarı́a a un curandero de Harley Street para que me
las consiguiera: sesenta pastillas y sesenta Mandrax cada vez. Todas las
modelos y la gente de Who's Who fueron a este tipo por sus pastillas
para adelgazar; estarı́a allı́ escribiendo recetas todo el dı́a. Una vez
llegué y el tipo estaba tan cansado de todos los guiones de mierda que
estaba escribiendo que en realidad se estaba quedando dormido en el
mostrador. Creo que al inal lo despidieron, pero no antes de que le diera
a mi forma de tocar la guitarra el empujó n quı́mico que habı́a estado
pidiendo a gritos.
Esas bellezas negras no eran una droga que tomarı́as solo para reı́rte:
el nivel de concentració n que te brindaban estaba má s allá de lo normal.
Oirı́as historias de amas de casa que habı́an hecho demasiado estando
despiertas toda la noche lavando platos o limpiando sus pisos con un
cepillo de dientes, simplemente obsesionadas por el má s mı́nimo
detalle. Podrı́a relacionarme, ya que me acerqué al aprendizaje de la
guitarra con má s o menos el mismo espı́ritu.
No me malinterpreten, me encantaba la mú sica y tenı́a oı́do para ella;
no era só lo una cosa mecá nica. Pero, sinceramente, no creo que me
hubiera convertido en un mú sico profesional si no hubiera tenido las
pastillas para ayudarme. Muchas personas que logran la sobriedad te
dirá n que la bebida o las drogas no hicieron má s que arruinar sus vidas,
y puede que tengan razó n, pero en mi caso, no creo que hubiera llegado
a ninguna parte sin ellas. Algunas de las mejores cosas que me han
pasado han sido en gran parte, si no del todo, debido a la bebida y/o las
drogas. Por eso es tan difı́cil dejar esta mierda.
Generalmente no me gustaba la velocidad, pero me encantaba la
sensació n que me daban esas pastillas. La emoció n de saber que podı́a
concentrarme en algo por una vez serı́a difı́cil de transmitir a alguien
que no hubiera tenido problemas en la escuela como yo. No es fá cil
aprender a tocar un instrumento correctamente y si lo dejara solo,
probablemente me habrı́a aburrido y perdido el interé s. Simplemente no
habrı́a tenido la paciencia para seguir con eso, mientras que todo lo que
tenı́a que hacer era tomar un par de esas pastillas y ¡bum! Atenció n al
cien por cien. Y cuanto má s rá pido progresaba, má s me metı́a en ello.
Era má s o menos como dijo Chuck Berry en su é xito clá sico 'Jonesy Be
Good': puede que no haya aprendido a leer o escribir tan bien, pero
podı́a tocar esa guitarra como si tocara una campana.
Sabı́a que estaba mejorando, pero a mis compañ eros de banda les
costó un poco convencerlos, especialmente a Cookie. Todavı́a estaba
haciendo su aprendizaje y creo que eso lo estaba alejando de nosotros.
Dijo que no seguirı́a adelante con la banda a menos que consiguié ramos
a alguien que realmente supiera tocar la guitarra correctamente, lo cual
yo todavı́a no podı́a, a pesar de que estaba llegando allı́. Obviamente me
lo tomé un poco como algo personal en ese momento, pero ya lo superé .
Cookie es en gran medida un tipo de persona que juega a lo seguro,
es todo lo contrario a mı́ en ese sentido. Voy a sumergirme de cabeza,
pero é l siempre quiere saber todos los si y los peros de lo que va a pasar.
Creo que Rotten odia eso de é l, pero tienes que tener un equilibrio para
que la quı́mica sea la correcta, ¿no es ası́? Una banda con cuatro
exaltados no va a llegar muy lejos.
Pusimos un anuncio en el Melody Maker buscando un 'chico prodigio
guitarrista' que tuviera veinte añ os o menos y 'no fuera peor que Johnny
Thunders'. Lo pusimos para mantener alejados a los tipos Sı́, aunque, en
retrospectiva, tocar con Steve Howe podrı́a haberme dado algo con lo
que rebotar, y pareció funcionar porque aparecieron muy pocos musos
reales.
Bá sicamente habı́a unos cuantos pilluelos y unos jodidos payasos.
Hicimos audiciones de todo tipo, unas treinta o cuarenta personas en
total. Mi favorito de los verdaderos idiotas era un tipo llamado Fabian
Quest. Lo sé , es un gran nombre, ¿no? Apareció con todos estos pedales
elegantes y todo eso, pero la vergü enza fue que este idiota tonto no
podı́a tocar una nota. Tambié n habı́a una especie de tipo hippie-rock
cerca del inal que podı́a jugar como loco. El ú nico inconveniente con é l
era que obviamente estaba drogado mientras lo hacı́a. Ojalá pudiera
saber quié n era y si despué s hizo algo má s, porque era un excelente
guitarrista.
Aunque se sintió como una gran pé rdida de tiempo mientras se
desarrollaba, este proceso de audició n funcionó muy bien, porque
inalmente convenció a Cookie de que yo era el ú nico juego en la ciudad,
al menos para el tipo de banda que ı́bamos a ser. . Mi estilo de tocar la
guitarra fue moldeado por la falta de conocimiento y la falta de
experiencia, por lo que complementaba tan bien la voz de John, porque
tenı́a exactamente la misma calidad natural y cruda. Cookie podı́a casi
mantener el ritmo para entonces y Matlock tocaba un poco el bajo, pero
en lo que a John y a mı́ respecta, está bamos aprendiendo a medida que
avanzá bamos. Eso fue lo que hizo que todo fuera tan genial.
La gente a menudo comenta sobre el hecho de que muchas de las
versiones que tocamos cuando está bamos pensando en el tipo de banda
que ı́bamos a ser: 'No Fun', 'Don't Give Me No Lip, Child', '(I' m Not) Your
Stepping Stone' – tenı́a la palabra 'No' en el tı́tulo. Eso no tuvo nada que
ver con McLaren, quien, como he dicho, no tuvo mucha participació n en
el lado musical de las cosas. Fue en parte una coincidencia y en parte se
debió a la actitud de Rotten. Cualquier cosa que fuera remotamente
positiva o involucrara algú n tipo de felicidad, amor o aprecio le daba
ganas de vomitar; ese cabró n nunca supo el signi icado de la palabra
obrigado . Pero la forma en que se mofaba a travé s de las letras
realmente le dio a esas viejas canciones, especialmente a las cursis como
'Don't Gimme No Lip, Child' de Dave Berry (cuyo original odiaba) un
poco de mordisco extra.
Otro disco positivo que fue muy importante para nosotros, pero que
nunca recibió tanto cré dito como deberı́a, fue el primer á lbum de
Jonathan Richman and the Modern Lovers. Judy Nylon tenı́a una de las
primeras copias que solı́a tocarme, y me pareció mucho má s importante
que cualquiera de los otros discos 'punk' de la Costa Este, todos los
cuales parecı́an estar hechos por hombres (o mujeres, en el caso de Patti
Smith). ) con el pelo largo que habı́a estado por un tiempo y era mucho
mayor que nosotros. No me gustó nada el á lbum de Patti Smith cuando
salió , no me atraı́a en lo má s mı́nimo. 'Roadrunner' de Richman fue
mejor que cualquier cosa que muchos pudieran hacer, razó n por la cual
los Sex Pistols terminaron versionando esa canció n, no una canció n de
Television con un solo de guitarra de veinte minutos.
Cuando se trataba de escribir canciones originales, la ira de Rotten
tambié n era una energı́a. Las dos canciones principales que tenı́amos
antes de que é l llegara eran 'Did You No Wrong' y 'Seventeen'/'Lazy Sod'.
La segunda de ellas fue la primera canció n adecuada que se me ocurrió ,
y recuerdo que Johnny se quejó de que no podı́a leer la letra con mi letra
(lo cual no era de extrañ ar, ya que todavı́a no podı́a escribir
correctamente), ası́ que los cambió a su gusto. Curiosamente, esa fue una
de las primeras veces que recuerdo escuchar la letra de una canció n con
verdadera atenció n, y eso fue porque en parte eran mı́as y me esforzaba
por escuchar lo que Rotten les habı́a hecho. Nunca pensé , '¿Qué está
haciendo jodiendo mi canció n?' aunque. Pude escuchar de inmediato
que su versió n era mejor.
Creo que esta es la ú nica canció n de los Sex Pistols que no era una
versió n en la que la letra es mitad y mitad; normalmente es é l quien los
hace todos. Va y viene. 'Nos gusta el ruido, es nuestra elecció n', ese soy
yo. A é l no le importa el pelo largo. 'No trabajo, solo acelero' soy yo, al
igual que 'tengo mucho que aprender', pero 'Solo tienes veintinueve' es
100% podrido. No es exactamente Lennon y McCartney, pero está
llegando. Y una vez que tuvimos un par de nuestras propias canciones
en marcha, Glen y Johnny se pusieron a trabajar juntos (lo cual me
pareció bien, ya que soy un holgazá n, como decı́a la canció n).
No salió bien. John siempre se quejaba de tener que dar una vuelta
por la casa de Glen. No creo que a John le gustara el origen de Matlock.
Aunque John era como un estudiante de arte, donde vivı́a con su familia,
siempre estaba rodeado de verdaderos 'erberts: la ma ia del Arsenal. No
es que estuviera directamente involucrado con esas cosas, pero Glen
simplemente tenı́a este trasfondo muy diferente de un buen hogar,
buenos padres y una buena escuela que realmente molestó a John. Esa
tensió n terminó entrando en las canciones de una manera que
realmente funcionó para nosotros, pero no necesariamente podrı́as
haberlo predicho desde el principio.
Me encantarı́a tener imá genes de nosotros ensayando desde el
principio. Verı́as a Cookie no sintié ndose con iado y preocupado de que
podrı́a ser mejor que siguiera con su aprendizaje, estarı́a holgazaneando
en mi reino de Denmark Street, inventando un riff extrañ o, y John
estarı́a sentado en la esquina escribiendo letras: en aquellas raras
ocasiones en que é l y Matlock no estaban en la garganta del otro. No se
puede culpar a Rotten por algunas de las palabras que se le ocurrieron:
que un chico de diecinueve añ os escribiera 'Pretty Vacant' y 'Anarchy in
the UK' fue jodidamente impresionante. Puede que antes no me
preocuparan demasiado las letras, pero reconocı́a un maldito clá sico
cuando lo escuchaba.
El ú nico problema era que, ademá s de las canciones que resistirı́an el
paso del tiempo, tambié n se podı́an ver algunos rencores duraderos. El
hecho de que Cookie y yo fué ramos los mejores amigos fuera de la
banda fue de initivamente un problema. Glen solı́a decir que é ramos
como Fred Flintstone y Barney Rubble, pero fue a John a quien
realmente le molestó . Como es muy inseguro, no le gustaba lo cerca que
é ramos. Todavı́a no le gusta cuarenta añ os despué s. Ahora puedo ver
có mo el hecho de que cuando terminaban los ensayos, Cookie y yo
solı́amos joder juntos, debe haberlo dejado un poco aislado. Habrı́as
pensado que tal vez los dos pasarı́an un rato má s juntos para equilibrar
todo, pero nunca funcionó de esa manera, porque en realidad no se
llevaban bien.
La ú nica á rea en la que nunca hubo ningú n con licto, curiosamente,
fue por el dinero de la composició n de canciones. Acordamos dividirlo
en partes iguales desde el principio. John era diferente entonces: era
má s "uno para todos y todos para uno" en los primeros dı́as, incluso si
está bamos en la garganta del otro la mayor parte del tiempo.
17. LAS CINTAS SPUNK
En lo que respecta a llegar a in de mes en los primeros dı́as en Denmark
Street, desde que nos mudamos allı́ en septiembre de 1975 hasta
nuestro primer concierto real un par de meses despué s, era la misma
vieja historia en lo que a mı́ respecta: es decir, estaba todavı́a robando
cosas. Comida, guitarras… cualquier cosa que pudiera tener en mis
manos, bá sicamente. He visto cosas escritas sobre nosotros estando en
el paro. Tal vez algunos de los otros lo eran, pero yo ciertamente no lo
era. La idea de irmar para conseguirlo parecı́a demasiado complicada y
o icial. Era como el examen de manejo, excepto que al inal obtenı́as
dinero. Y de todos modos, lo estaba haciendo bien por mi cuenta.
Má s tarde, irmar se verı́a como una parte integral de la cosa punk.
Pero para mı́, el paro era como una okupació n: una mierda con la que
nunca quise tener nada que ver. En un mundo ideal, hubiera preferido
una casa de lujo donde pudiera vivir có modamente con mi alfombra de
piel de leopardo y mi lindo esté reo. Dinamarca Street todavı́a estaba un
poco por debajo de eso: recuerdo que habı́a ratas y ratones por ahı́.
Malcolm incluso fue al mercado de mascotas de Club Row en el East End
y nos consiguió un gato para ayudar a mantenerlos bajo control.
Tuvimos que poner visillos para tener un poco de privacidad porque
la gente de Hipgnosis tenı́a su estudio de arte justo al otro lado del patio.
Ellos fueron los que hicieron todas las portadas hippies de los discos de
Pink Floyd. Uno de los muchachos allı́, Peter Cristopherson, que
terminarı́a en Throbbing Gristle (cuando se hacı́a llamar Sleazy), nos
convenció de que le permitié ramos tomar fotos extrañ as de la banda.
Tenı́a un tema diferente para cada uno de nosotros. El mı́o era ser un
convicto fugitivo en pijama y esposado, Paul estaba cubierto de heridas
de bala y John estaba en una camisa de fuerza. El ú nico de nosotros que
no estaba contento era Glen, porque tenı́a que vestirse como chico de
alquiler. Dirı́a 'si la gorra encaja', pero esa gorra en realidad no encajarı́a:
Glen era demasiado mojigato para hacer algo tan interesante.
Ademá s de llevar los dedos hasta el hueso tocando con The Stooges,
habı́a centrado mis actividades delictivas en acumular el material que
necesitarı́amos si inalmente ı́bamos a dar conciertos. El ampli icador de
reverberació n doble que tenı́a desde el principio es el mismo tipo de
detalle clave que el skinhead que no usa camisetas Brutus. Me guié por
lo que usaban los Rostros, ya que solo el mejor equipo era lo
su icientemente bueno para ellos. Siempre pensé que la reverberació n
procedı́a de una banda que teloneaba a Bob Marley y los Wailers en
Hammersmith Odeon, pero en realidad no tocaron allı́ hasta 1976, ası́
que debo haber confundido un poco la sincronizació n. Tal vez mi Cloak
de con ianza habı́a desarrollado una funció n de má quina del tiempo
porque puedo recordar claramente como cualquier cosa que acechaba
detrá s del escenario como si fuera el lugar donde debı́a estar, luego
deambulaba antes de que Marley subiera al escenario y simplemente lo
sacara por la puerta trasera.
Es increı́ble que nunca me atraparan ni me dieran una buena patada,
pero cuando la gente te ve empujando un ampli icador fuera del
escenario, piensan que eres un roadie. Otra noche en el Hammersmith
Palais solı́an tener un escenario giratorio con dos bandas, bá sicamente
mú sicos de sesió n tocando covers. Entraba allı́ con un abrigo grande y
luego, cuando el escenario giraba, me iba por la parte de atrá s y me
comı́a todo lo que podı́a. De ahı́ es de donde vinieron los platillos de
Cookie: simplemente los saqué de la baterı́a, los puse debajo de mi
abrigo y caminé por la pista de baile. Nadie lo pensó dos veces.
La estrella de nuestro primer concierto real, al menos en té rminos de
nuestro equipo, fue mi enorme ampli icador Marshall de 100W.
Está bamos tocando en la escuela de arte de St. Martin , que estaba
convenientemente justo al otro lado de Tottenham Court Road desde
Denmark Street. La otra banda era un acto de pub-rock llamado Bazooka
Joe que tenı́a a Adam Ant (no se vestı́a como un pirata en ese escenario),
y cuando probamos sus cosas en la prueba de sonido no sonaba fuerte.
su iciente, ası́ que cruzamos la calle y rodamos en este puto ampli icador
gigante.
El concierto era solo en una habitació n pequeñ a y una vez que el
ampli icador estaba encendido, era tan jodidamente fuerte que era como
tener un avió n jumbo aterrizando en tu sala de estar. Estaba tan
nervioso que me tomé un par de pintas y un Mandrax de antemano para
calmarme. Mandy apareció durante 'Did You No Wrong' y recuerdo
mirar a John y apoyarme en é l por un segundo mientras tocá bamos. Me
empujó un poco y en ese momento estaba pensando: 'Esto, en este
momento, es lo mejor del mundo'. El era el cantante y me encantaba
tocar en la banda con é l y todo se sintió jodidamente genial.
Lamentablemente, ese sentimiento no volverı́a muchas veces, pero al
menos siempre tendrı́a el recuerdo.
Es posible que el volumen fuera demasiado para las personas que no
estaban en Mandrax. Bazooka Joe nos odiaba tanto que nos apagaron
despué s de unos nú meros y hubo una pelea, pero no importaba. La caja
de Pandora estaba abierta para los jodidos negocios. Hicimos otro show
la noche siguiente y pronto Malcolm nos coló en los carteles a diestro y
siniestro. Debido a que no querı́a que nadie cometiera el error de pensar
que é ramos simplemente otra banda nueva en el circuito de pub-rock,
McLaren puso mucha energı́a en asegurarse de que tocá ramos en
lugares diferentes a los lugares comunes y corrientes. tocarı́an bandas.
Ya sea que esto signi ique ordeñ ar los contactos de Glen para
llevarnos al circuito de la escuela de arte o contratarnos para tocar en
clubes de striptease o cines o iestas de moda o bares de lesbianas,
siempre aparecı́amos y hacı́amos el trabajo de la misma manera, sin
importar el entorno. Una vez que superé el miedo a ese primer
concierto, descubrı́ que ya no necesitaba el Mandrax. Todavı́a estaba tan
nervioso que normalmente vomitaba antes de cada show, y siempre
tomaba unas cervezas para relajarme, pero nunca estaba borracho. En
cuanto a tocar, é ramos bastante profesionales: siempre hicimos todo lo
posible para que sonara lo mejor posible. Solo querı́amos hacer las
canciones, no querı́amos ninguna jodida tonterı́a.
Obviamente, no pudimos ni oler a un roadie, ası́ que tuvimos que
montar todo lo que nos rodeaba. Tenı́amos nuestro propio sistema de
megafonı́a que habı́a robado; no recuerdo dó nde lo conseguı́, pero
de initivamente estaba fuera de la camioneta de alguien. Eran má s o
menos dos grandes gabinetes de parlantes conectados a un ampli icador
de guitarra principal H y H. El ampli icador era un equipo bastante
moderno en ese momento; tipo de transistorizados, no vá lvulas o tubos
o lo que sea que solı́an tener antes. Nunca tuvimos monitores, solo estos
dos parlantes, el ampli icador y un par de micró fonos. Ni siquiera creo
que hayamos microfoneado la baterı́a de Cookie, porque si está s tocando
con estos pequeñ os trucos, realmente no necesitas hacerlo.
Podı́as ver cuá nto está bamos abriendo nuevos caminos en todos los
jodidos lugares extrañ os en los que tocamos. Y la gente con la que
tocá bamos: como no habı́a otras bandas como nosotros, nos
encontrá bamos tocando en conciertos ridı́culos como apoyar a
Screaming Lord Sutch en High Wycombe. Recuerdo estar de pie
mirá ndolo, y todo el espectá culo fue solo una broma. Hubo un poco de
bronca porque Johnny rompió sus micró fonos y luego negó
rotundamente que é l lo habı́a hecho, a pesar de que muchas personas,
incluido el mismo Señ or, lo habı́an visto con sus propios ojos.
Doctors of Madness, en algú n lugar del norte, ese fue otro ocupado.
No nos dejaban usar sus monitores y eso realmente me puso nervioso.
Entonces, cuando estaban en el escenario, entré en su camerino y les
robé todas las carteras. Y podrı́a haber habido un incidente debajo del
escenario mientras ellos tocaban, conmigo follá ndome a este gran pá jaro
universitario estadounidense que era uno de sus amigos por
correspondencia. Con todo eso y tocando un set propio, estaba exhausto
al inal de la noche.
Debido a que no habı́a una escena en la que encajar, tuvimos que
hacer la nuestra. Si eso signi icaba tocar en una iesta en el lujoso
almacé n de Andrew Logan cerca del Tower Bridge una noche (todos los
artistas en esa multitud, no se permitı́an erberts (excepto nosotros, por
supuesto)) y luego apoyar a Eddie & the Hot Rods en el Marquee dos
dı́as má s tarde, eso era exactamente lo que ı́bamos a hacer. El show de
Marquee fue divertido porque mucha gente nos vio por primera vez esa
noche. Un tipo de la NME estaba allı́ y todos se emocionaron mucho con
Rotten y Jordan lanzando algunas sillas. De lo que no se dieron cuenta
fue de la razó n por la que lo estaba haciendo. Como nunca antes
habı́amos jugado con monitores, esta era la primera vez que podı́a
escucharse a sı́ mismo correctamente. Estaba tan sorprendido por lo
mal que pensaba que sonaba que se asustó por completo. Despué s de
eso, se dedicó má s a las lecciones de canto que Malcolm le habı́a
reservado. Realmente no creo que hicieran ninguna diferencia, y gracias
a la mierda por eso, porque la forma en que Johnny cantaba era una gran
parte de nuestro sonido.
Hay un poco de metraje de pelı́cula Super-8 que Derek Jarman ilmó
de nosotros en la cosa de Logan, solo unos treinta segundos, pero
su iciente para hacerse una idea. Creo que es la primera pelı́cula
adecuada de nosotros tocando en vivo, y se nota que es temprano
porque todos aparentamos tener diez añ os. Me encantaba hacer
conciertos ası́, donde habı́a algo diferente. Era mucho má s divertido que
los clubes de hombres trabajadores del norte donde todos, excepto tal
vez dos o tres personas en cada concierto, sintieron una maldita
antipatı́a instantá nea hacia nosotros. Para ser honesto, algunos de estos
trucos extrañ os llenos de norteñ os con bigotes que llevaban bengalas
eran aterradores. Sabes que a esos cabrones no les gustará s, pero
cuando empiezan a tirar cosas al escenario, no es una buena sensació n.
Por el lado positivo, habı́amos comenzado a recoger algunos
faná ticos en el camino. Para empezar, estaba la gente de Bromley, a
quienes ni siquiera considerá bamos faná ticos porque eran totalmente
geniales y parecı́an estar al mismo nivel que nosotros. No eran Johnny-
come-lalys, eran Siouxsie-come-earlies. Ademá s de Siouxsie, estaba
Steve Chaos (que se convirtió en Steve Severin una vez que los Banshees
se pusieron en marcha), Billy Idol y algunos otros. Todas estas personas
estuvieron presentes desde el principio y fue bueno tenerlas.
Comenzaron a presentarse en tantos conciertos como pudieron y
realmente nos hizo sentir que está bamos llegando a alguna parte. Lo
gracioso fue que todos parecı́an provenir de lugares en los que nunca
habı́a estado en las afueras de Londres; sobre eso escribió John la
canció n 'Satellite'. No les estaba hablando con desdé n; bueno, lo era,
pero a ellos no les importaba, porque odiaban los tugurios suburbanos
de los que procedı́an incluso má s que é l.
El momento má s emocionante siempre es justo antes de que todos
sepan qué es algo. Pregú ntale a cualquier banda cuá ndo fueron má s
felices y probablemente te dirá n que los mejores momentos fueron justo
antes de ser conocidos: cuando NME te hizo su primera pequeñ a
entrevista y estabas conduciendo arriba y abajo de la M1 en una
camioneta Transit. Ese siempre será el momento má s puro y genuino,
porque sientes que está s todos juntos en esto. Nadie sabe quié n eres, ası́
que no tienes ese otro elemento que se cuela despué s: cuando te haces
famoso, la gente cambia. Ni siquiera habı́amos hecho un disco entonces,
pero me encantarı́a retroceder en el tiempo y vernos a los cuatro
conduciendo hasta esos malditos clubes de trabajadores con todo el
mundo escupiendo y tirá ndonos botellas.
Si hubiera sido un niñ o en ese momento, Johnny Rotten
probablemente habrı́a sido mi ı́dolo de la misma manera que Rod
Stewart lo fue para mı́ cinco añ os antes. No solo tenı́a un aspecto
fantá stico, tambié n tenı́a un ingenio agudo y un intelecto real, y nadie
má s podı́a acercarse a las letras que estaba escribiendo. Incluso si
algunas de las canciones tardaron un tiempo en encontrar sus tı́tulos
correctos: 'Anarchy in the UK' comenzó como 'Nookie' y 'No Future'
inalmente se convirtió en 'God Save the Queen'.
No estoy tratando de quitarle el cré dito a Glen por la composició n
original, pero la razó n por la que é l y yo trabajamos tan bien juntos fue
que se le ocurrió algo bastante complicado: los 'malditos acordes de los
Beatle' que llevaron a John a la cima. pared, y luego conducirı́a una
excavadora a travé s de ella. Escuchas algunas progresiones de acordes
complejas tocadas exactamente bien y te entran por un oı́do y te salen
por el otro. Dá selos a alguien que no esté demasiado preocupado por las
sé ptimas y las undé cimas, y de repente funcionan a otro nivel. Glen fue
tan educado que si hubiera tocado la guitarra en nuestros discos, no
creo que nadie los hubiera notado. Una vez que me hice cargo de los
acordes que habı́a escrito originalmente, terminamos con algo que era
brutalmente directo pero no simple; puñ o de hierro en guante de
terciopelo.
De initivamente habı́a una sensació n de que ı́bamos a la cabeza, pero
algunos advenedizos ya nos pisaban los talones. Mick Jones vino a la
calle Dinamarca a la hora de las audiciones para un segundo guitarrista.
En ese momento se vestı́a como Johnny Thunders o algú n otro tipo
glamoroso con el pelo largo y las plataformas. Jugó con nosotros y fue
emocionante porque en realidad sabı́a lo que estaba haciendo, hasta
cierto punto. La pró xima vez que lo vimos se habı́a cortado el cabello y
vestı́a camisas con escritos por todas partes.
Fue lo mismo con Joe Strummer. Estaba en una banda llamada The
101ers que abrimos por primera vez cuando tocamos en Nashville. Eran
como una cosa de pub-rock pero con un estilo má s de los añ os
cincuenta: me recordaron los primeros dı́as de Let It Rock. Sin embargo,
creo que lo hicimos sentir un poco desactualizado, porque se convirtió
de inmediato, y lo siguiente que supimos fue que é l y Jones estaban en
The Clash junto con Bernie Rhodes dirigié ndolos.
Me gustó The Clash una vez que empezaron. Y The Damned,
Buzzcocks, incluso The Stranglers, aunque en realidad nunca fueron
aceptados porque eran mayores. Fue genial tener algunas bandas
nuevas decentes para variar. Eramos la punta de lanza, pero ellos no se
quedaban atrá s, y nunca los menosprecié por ir detrá s de nosotros.
Despué s de todo, todo lo demá s estaba pasando, ası́ que nunca culpé a
nadie por gravitar hacia su versió n de lo que está bamos haciendo.
Ahora es fá cil mirar hacia atrá s y pensar que no fue gran cosa, pero
en ese momento todos decı́an: 'Joder, sı́, tendré algo de esto'. La
sensació n de que todo el mundo se alineaba detrá s de nosotros era
realmente emocionante, y é ramos totalmente conscientes de lo que
estaba pasando. Era como un virus que se habı́a estado incubando
durante mucho tiempo y luego, de repente, todos lo estaban
contagiando.
Sin embargo, no podı́amos permitirnos el lujo de dejar crecer la
hierba debajo de las enredaderas de nuestro burdel, o alguien má s
vendrı́a y se llevarı́a toda la gloria. El primer estudio adecuado al que
fuimos fue Majestic en Clapham. Mickie Most, que era como el Simon
Cowell de los añ os sesenta y setenta, excepto que en realidad hizo
algunos buenos discos, usaba mucho ese lugar y creo que durante cinco
minutos Malcolm pensó en que irmá ramos con su sello. O, má s
probablemente , McLaren se lo acaba de decir para que consigamos el
lugar barato. De cualquier manera, estuvimos allı́ un dı́a en mayo de
1976 y grabamos tres pistas. No hubo tiempo para reunir toda la pared
de sonido de los Sex Pistols, pero fue una experiencia genial.
Incluso ir allı́ en la camioneta fue emocionante, y me gustó estar en
un estudio adecuado desde el primer minuto que entré en el lugar. Me
encantaba grabar tanto como, si no má s, que odiaba ensayar. Reunir las
canciones en el estudio se convirtió en mi parte favorita de todo el
proceso, pero solo cuando habı́a tiempo para hacer má s de una
sobregrabació n. Por el momento, las tres pistas que hicimos, 'Pretty
Vacant', 'Problems' y 'No Feelings' (que luego se convertirı́a en 'God Save
the Queen'), salieron muy monó tonas. Si vuelves a escuchar ese demo,
en realidad suena como una producció n de Mickie Most, porque es muy
seco.
El tipo que lo produjo fue Chris Spedding, y solı́a verlo practicar con
su banda The Sharks entre mover arena en una carretilla y tocar la
guitarra de Ariel Bender en ese estudio de King's Road. Habı́a tenido un
sencillo de é xito desde entonces con la canció n 'Motor Bikin', que le
habı́a visto hacer en Top of the Pops , pero bá sicamente era un guitarrista
de sesió n que habı́a trabajado con Roxy Music y Nilsson, por no decir
má s. menciona a los Wombles. Era un tipo bastante bueno para tener a
mano la primera vez que estuvimos en un estudio, pero todavı́a
tenı́amos un camino por recorrer antes de encontrar la manera de
grabar lo que está bamos haciendo en una cinta.
La forma en que lo hicimos fue haciendo The Spunk Tapes , que eran
versiones de demostració n de nuestras mejores canciones. Los
grabamos en un cuatro pistas en Denmark Street durante un par de
semanas a ines de julio en el largo y caluroso verano del '76. Ya
habı́amos hecho un montó n de conciertos en el 100 Club y un par de
mini giras por los rincones del norte, ası́ que nos está bamos poniendo
bastante… bueno, pulido serı́a la palabra equivocada, pero mierda
caliente casi lo cubrirı́a. Lo mejor de grabar en Denmark Street fue que
el equipo estaba con igurado todo el tiempo, por lo que habı́a
oportunidades ilimitadas para experimentar y podı́a hacer muchas
sobregrabaciones.
Ese fue un momento muy divertido. El ú nico pequeñ o inconveniente
fue que el viejo con el que las grabamos, un jodido hippie llamado Dave
Goodman que nos habı́a alquilado nuestro PA de gira, dirı́a má s tarde
que todo lo bueno de có mo soná bamos se debı́a a é l, mientras ganaba
dinero vendiendo de bootlegs en vivo de calidad de mierda, que
mostraban cuá n altos eran sus está ndares cuando lo dejaban solo.
Otra consecuencia de la sesió n anterior de Chris Spedding fue que
esta ave alemana llamada Nora entró en escena. Ella era la novia de
Chris en ese momento. Bernie Rhodes dijo que la recordaba tonteando
con Jimi Hendrix unos añ os antes, ası́ que no podı́as acusarla de tener un
tipo. De todos modos, ella vino a vernos jugar desde el principio, nos
miramos a los ojos, y lo siguiente que supe es que estaba saliendo con
ella. Tiene un piso muy bonito, y es mi primer contacto con la buena
vida. Incluso me compró una guitarra Flying V, lo que molestó a
Malcolm, creo que la vio como una intrusa. Como el personaje de novia
en Spinal Tap unos añ os má s tarde que pronunció mal 'Dolby'.
No podı́a ver cuá l era su problema en ese momento. Ella era una
dama muy dulce, ademá s esto fue en el momento de arriba y abajo de la
autopista en un Ford Transit cuando tener una momia de azú car
alemana era solo otra pequeñ a aventura. Tenı́a mucho dinero, como una
verdadera heredera. Creo que su padre tenı́a un perió dico o algo ası́.
No fue solo McLaren quien lo desaprobó . A Rotten tambié n le
molestó que la viera. Solı́a reprenderme por eso: '¿Por qué andas con
ella?' Si alguien nos hubiera dicho entonces que acabarı́a casá ndose con
ella y que seguirı́an juntos má s de treinta añ os despué s, no sé quié n de
los dos nos habrı́amos sorprendido má s.
El orden en que sucedió todo esto se sumó a las muchas
complejidades de mi relació n con John a lo largo de los añ os, pero yo no
era una amenaza romá ntica para é l a largo plazo. No puedo tener
intimidad con nadie, porque solo estoy buscando má s. Solo me atraen
los extrañ os, eso es lo mı́o. No se trata de hacer el amor, se trata de follar
con alguien en un callejó n o pagarle a una prostituta; eso es lo que me
excita, donde no hay jodidos sentimientos involucrados. Una vez que los
sentimientos se involucran, he terminado.
Hicimos el segundo de los dos espectá culos del Free Trade Hall por
esta é poca, que los geezers de Joy Division y muchos otros mú sicos de
Manchester, incluido mi buen amigo Billy Duffy de The Cult, dirı́an má s
tarde que fue la razó n por la que todos decidieron formar bandas . .
Mirando hacia abajo desde el escenario, no habrı́as sabido que
Morrissey y todos estaban allı́. Aparte de todo lo demá s, no era una
multitud tan grande, y desde donde yo estaba parado parecı́an un grupo
está ndar de capullos del norte con bigotes y corbatas de arenque.
Sin embargo, juego limpio para Tony Wilson. El fue quien tuvo los
cojones de poner a los Sex Pistols en su programa de televisió n de
Granada, So It Goes , cuando casi nadie má s habı́a oı́do hablar de
nosotros. Fue realmente emocionante hacer nuestra primera parte de la
tele. Recuerdo estar un poco nervioso porque ı́bamos a cagarla, pero
afortunadamente no lo hicimos. Esa es la famosa 'Anarquı́a' con Jordan,
que es una de mis apariciones favoritas en televisió n. A diferencia del
má s notorio un par de meses despué s, no salió en vivo. Tony Wilson fue
un verdadero amor; fue una gran vergü enza cuando murió joven.
Supongo que lo que logró al ayudar a Joy Division a convertirse en New
Order despué s de que Ian Curtis se suicidó muestra la diferencia que
puede hacer tener un gerente que quiere resolver tus problemas en
lugar de animarte a clavar el cuchillo.

Ó Á
18. ¿DÓNDE ESTÁ BILL GRUNDY
AHORA?
Para septiembre de 1976, las cosas realmente estaban cociná ndose.
Cookie incluso nos dio el ú ltimo voto de con ianza al renunciar a su
trabajo. Está bamos tocando en un concierto especial en Chelmsford Nick
la noche que terminó su aprendizaje, y Paul se enojó tanto que se cayó
de su taburete de baterı́a. Da la vuelta a Keith Moon y cué ntale la noticia
a John Bonham.
La noche que tocamos en la inauguració n de un club en Parı́s en mi
cumpleañ os nú mero 21 fue otra grande. Era la primera vez que me subı́a
a un avió n; mi ú nico viaje al extranjero habı́a sido a Calais en el ferry con
Jimmy Macken un par de añ os antes. Porque sabı́a que Jim podı́a cuidar
de sı́ mismo, eso me dio má s licencia para ser un jack-the-lad que de
costumbre. Terminé ofreciendo todo el club nocturno y nos golpearon
unos cincuenta viejos. Tuvimos suerte de salir con vida, de verdad,
especialmente despué s de que le robé la cá mara a un tipo del balcó n del
hotel como recuerdo. Es gracioso, esa mentalidad britá nica de irse al
extranjero y empezar problemas, ¿no? Supongo que se remonta al
Imperio.
De todos modos, ahora me estaba moviendo en diferentes cı́rculos.
Mis amistades con Macken y Hayesy habı́an disminuido un poco; creo
que se sintieron excluidos con todas las cosas de la banda. Y ese in de
semana en Parı́s fue increı́ble. El lugar estaba repleto de gente disco
como John Travolta, pero no nos importó . Billy Idol condujo a la ma ia de
Bromley y todos durmieron en su camioneta. Malcolm me consiguió el
regalo especial de cumpleañ os de un lató n (obviamente no es el
primero, pero aú n ası́, era la idea lo que contaba) y hay algunas fotos
divertidas en el libro de fotos Sex Pistols de Ray Stevenson de mı́
luciendo totalmente jodido despué s de haber seguido todos esperando
mientras obtenı́a el má ximo rendimiento de la inversió n de McLaren.
Ray era el hermano fotó grafo de Nils, quien era una especie de
gerente de gira y mediador cada vez que surgı́an problemas (lo que
obviamente sucedió mucho). Nils era bá sicamente el chico de Malcolm,
pero tambié n me gustaba porque era un sabueso desviado como yo.
Entre los dos, follá bamos todo lo que se movı́a. A Cookie tampoco le
estaba yendo mal ya Glen le gustaba alguna que otra, aunque nunca se
metı́a exactamente, pero Rotten... nada.
Alguien me mostró esa parte en el libro de Viv Albertine de The Slits
donde ella está tratando de chupar a Rotten pero a é l no le gusta y la
culpa, diciendo que no sabe lo que está haciendo. Tı́pico de Johnny:
incluso cuando todo sale bien, sigue gimiendo (y no me re iero a estar
en é xtasis). No me habrı́a quejado, eso seguro.
Hubo mucho sexo en este momento, al menos, lo hubo de mi parte.
En cualquier oportunidad que tuviera, estarı́a tratando de alejarme,
generalmente en un armario o en un bañ o o en un callejó n en la parte
trasera del lugar. Esos encuentros furtivos fueron una gran excitació n
para mı́. Lo gracioso fue que, pú blicamente, la actitud del punk hacia el
sexo era muy despectiva. Esa fue una de las razones por las que los
pá jaros punk en general no eran lo mı́o. Desde un comienzo parado (que
generalmente era el tipo de comienzo que estaba teniendo)
simplemente no era una apariencia que me pareciera particularmente
atractiva. Pero habı́a un ethos completamente ridı́culo de que no se
suponı́a que salieras con modelos o pá jaros del mundo de la moda o el
mundo del espectá culo. ¡A la mierda eso! A nadie le importó cuando lo
hizo Rod Stewart.
Cuanto má s duraba el punk, má s espesas se volvı́an las nubes de
mierda que lo rodeaban. Joder sabe de dó nde vino todo este aire
caliente: 'Oh, estamos de acuerdo con la gente, somos antisistema, no
queremos dinero, nunca podrı́amos dejar nuestra okupació n'. Una cosa
es segura, no vino de mı́. Sin embargo, todavı́a era una verdadera
ná usea. Y a medida que comenzamos a llegar realmente a alguna parte,
nuestro é xito fue un arma de doble ilo: cuanto mejor lo hacı́amos,
menos se nos permitı́a demostrarlo. Me sentı́ culpable solo de pensar en
comprar un motor. Como digo, no tengo idea de dó nde vino toda esta
mierda, pero de initivamente contribuyó todo el rollo anti-rock-star de
nuestro cantante principal, y especialmente cuando se trataba de sexo.
Rotten siempre decı́a que no era gran cosa. ¡Habla por ti, Jhonny!
En el libro de Viv Albertine, ella escribe sobre có mo trato de
localizarla en el hueco de la escalera fuera de la discoteca Royal College
of Art. Parezco un poco amenazador por un minuto, pero luego Mick
Jones, con quien estaba saliendo en ese momento, aparece para
arrancarla de mis garras como un caballero con una jodida armadura
brillante. En mi defensa y para que conste, me gustarı́a decir que cuando
le pido que me la chupe y ella dice que no, me ofrezco a follá rmela, lo
que segú n mis cá lculos me convierte en el perfecto caballero; feminista,
incluso.
¿Era yo un cabró n para los pá jaros en ese momento? Espero que no.
Me gusta pensar que fui bastante directo con las mujeres sobre lo que
podı́an esperar de mı́. No podı́a tener el tipo de relació n en la que los
sentimientos reales estuvieran involucrados porque estaba jodidamente
dañ ado, pero de initivamente era bueno para una cogida en la parte
trasera del Nashville. Hasta cierto punto, tenı́a esa cosa chovinista en la
que veı́a a las mujeres como objetos sexuales primero y cualquier otra
cosa en segundo lugar, pero no creo que fuera el ú nico hombre en la
industria de la mú sica en la dé cada de 1970 que cometió ese delito
menor. De hecho, serı́a má s difı́cil encontrar uno que no lo hiciera.
De initivamente fui culpable de no tomar a Chrissie Hynde en serio
como mú sico. Ella estarı́a hablando de querer estar en una banda y yo
estarı́a como, 'Sı́, lo que sea, chupa esto'. Probó para la mayorı́a de las
nuevas bandas de punk que estaban comenzando en ese momento, pero
la dura verdad era que nadie la querı́a porque era una niñ a. Chrissie se
rió la ú ltima en eso al tener un montó n de é xitos masivos con los
Pretenders. Y al inal, la gente como ella, Siouxsie, The Slits, The
Runaways y Gaye Advert, que estaba de moda en ese momento, hizo
mucho para abrir las cosas, por lo que la gente no pensó que era raro
que las chicas estuvieran en bandas. má s.
¿Estarı́a mintiendo si dijera que hice todo lo que estaba a mi alcance
para luchar contra el sexismo en el rock 'n' roll? Sı́, jodidamente lo harı́a.
Pero en ese momento yo era solo un poco como un muchacho tratando
de tener sexo con la mayor frecuencia posible. Todo era todavı́a bastante
nuevo para mı́, y el loco hombre lobo de mi adicció n al sexo estaba añ os
en el futuro. Tendrı́a que estar sobrio para que esa mierda realmente
haga efecto.
Mientras tanto, habı́a un lago de maldito alcohol para beber y muchas
má s aventuras para vivir. El lugar en el que jugamos má s, y donde
probablemente nos sentimos má s en casa, fue el 100 Club en Oxford
Street, justo al inal de la calle donde esos cabrones con dados me
engañ aron por diez libras cuando era niñ o. Hicimos un concierto allı́ casi
todas las semanas durante el comienzo del verano. Comenzó con un
apostador extrañ o que nos habı́a visto y le habı́amos gustado y tal vez
intentó parecerse un poco, pero cuando llegamos al 'festival punk' allı́ a
ines de septiembre, realmente se sentı́a como algo estaba pasando
Sé que a Matlock no le gustaba que nos llamaran 'punks', pero nunca
me molestó . Creo que Caroline Coon tuvo algo que ver con esa palabra
despegar: la mencionó en un artı́culo y se puso de moda. Ella estaba
bien, Caroline: otra de esas elegantes aves ex-hippies que se
engancharon a toda la escena en los primeros dı́as. Terminó saliendo
con mi compañ ero Paul Simonon de The Clash durante bastante tiempo.
De todos modos, volvamos al festival punk en el 100 Club. Todos los
iniciados que habı́an estado dando vueltas por un tiempo estaban
empezando a formar sus propias bandas para entonces. Ademá s de The
Clash, estaba Subway Sect, que nos habı́a visto en el Marquee la vez que
Rotten se escuchó a sı́ mismo por primera vez, y una versió n temprana
de Siouxsie and the Banshees donde Siouxsie y Steve tocaban con Sid
(en la baterı́a). – mejor lugar para é l) y Marco, que terminó en Adam and
the Ants. Por supuesto, no eran buenos, de hecho eran horribles,
ninguno de ellos podı́a tocar una nota, pero eso no parecı́a importar
mucho en ese entonces.
El pú blico empezaba a hacerse una idea de có mo debı́an comportarse
los punks. La agresió n e incluso la violencia absoluta fueron
de initivamente parte de eso. Para entonces, Sid le habı́a llevado su
cadena a Nick Kent, y una botella que rompió en el 100 Club Punk
Festival le sacó un ojo a una chica. A Vivienne Westwood tambié n le
gustaba comenzar peleas extrañ as, era muy ené rgica, pero pasaba má s
tiempo tratando de detener las peleas que iniciá ndolas.
La tensió n en el escenario fue de initivamente parte de lo que atrajo a
la gente hacia nosotros. Ya sea Mick y Keith o yo y Rotten o Slash y Axl,
cuando las bandas tienen ese tiró n invisible que te atrapa, generalmente
no es por cuá nto se gustan. No tienes que verlo en realidad: no es como
si estuviera mirando mal a Johnny todo el tiempo mientras é l estaba
dando cuerda a la multitud o soná ndose la nariz o lo que sea que estaba
haciendo, es solo que esa es la fuente de la energı́a.
A veces, las personas, incluso las personas que nos conocı́an bastante
bien, se equivocaban cuando se trataba de los brotes que tenı́amos en el
escenario. A menudo habı́a una simple causa prá ctica detrá s de lo que
parecı́a un estallido emocional. Recuerdo una vez anterior en el 100
Club donde Rotten saltó fuera del escenario y Glen casi se pelea con é l. El
libro de Chrissie Hynde habla de mı́ arrancando todas las cuerdas de mi
guitarra y teniendo un poco de rabieta, lo que ella pensó que era porque
estaba muy molesto con Rotten, pero en realidad estaba jodido con las
cuerdas Rotosound de mierda que tenı́a en este Sunburst. Les Paul que
habı́a adquirido. Tenı́a una barra de tré molo Bigsby y todo se desa inaba
cada vez que lo usabas. Ası́ que lo destrocé .
Lo que tenı́amos que hacer era encontrar la manera de concentrar
nuestra ira para hacer una declaració n de initiva de lo que eran los Sex
Pistols. Firmar con EMI, el má s antiguo y mejor establecido de todos los
sellos discográ icos britá nicos, y lanzar 'Anarchy in the UK' como single
serı́a volver a la puta red en lo que a eso se re iere. Cuando entramos en
el estudio a principios de octubre, ya no está bamos jugando, realmente
sabı́amos lo que está bamos haciendo.
Desafortunadamente, Dave Goodman, como jodidamente hippie que
era, no habı́a recibido ese memorá ndum. O deberı́a decir
afortunadamente, porque si hubié ramos seguido hacié ndolo con é l,
Never Mind the Bollocks... probablemente habrı́a terminado como el
primer á lbum de The Clash cuando consiguieron que su té cnico de
sonido lo produjera. Escucha ese disco. y los tambores suenan como un
puto paquete de patatas fritas. Dave habı́a fumado tanta hierba que
cuando está bamos en los estudios intentando grabar 'Anarchy', nos
obligó a hacerlo unas cien veces. Sus oı́dos estaban tan vidriosos que
nunca iba a ser lo su icientemente bueno. Eventualmente pensamos,
'Mierda, esto no va a suceder', y en su lugar incluimos a Chris Thomas.
Una vez que estuvimos en Wessex Studios con Chris, eligió la segunda
toma que hicimos. Tan pronto como tuvimos un productor adecuado, fue
como, 'Fó llame, por in, de esto se trata todo'. No recuerdo cuá l era la
conexió n original, aparte del hecho de que Chris habı́a hecho los
á lbumes de Roxy Music que a Cookie ya mı́ nos encantaban, pero era el
hombre perfecto para el trabajo. No clase media exactamente, pero un
poco moderno. Simplemente nos dio esa con ianza de que sabı́a lo que
estaba haciendo. Ademá s, no era un tipo punk, lo cual era bueno. Lo
ú ltimo que necesitá bamos era un capullo con el pelo de punta que
tuviera el aspecto pero que no supiera distinguir un extremo de un
estudio del otro.
Siempre he preferido estar rodeado de profesionales. Es por eso que
me gustan las grandes compañ ı́as discográ icas: no quiero estar cerca de
un sello independiente de Mickey Mouse donde todos tienen reuniones
de comité sobre quié n va a salir a comprar los falafels. Ese fue otro
concepto erró neo real sobre el punk: 'Oh, escribe tu propia revista,
comienza tu propio sello'. Me importa una mierda esas cosas. Si eres
bueno, podrá s conseguir un concierto bien pagado en uno de los lugares
que ya está n allı́. No pretende ser un maldito pasatiempo.
Todo estaba perfectamente con igurado. Hicimos la mı́mica de
'Anarchy in the UK' frente a un montó n de faná ticos en el programa de
televisió n de la BBC Nationwide , habı́a un documental punk en ITV y el
sencillo saldrı́a la ú ltima semana de noviembre con nuestra gira má s
grande reservada para seguirlo. arriba. Y luego, el 1 de diciembre,
sucedió Bill Grundy.
Creo que Queen estaba destinado a estar originalmente, pero no
pudieron hacerlo, por lo que EMI envió a sus prometedores compañ eros
de sello, los Sex Pistols, en su lugar. El programa Today era un aburrido
programa de noticias locales de Londres a primera hora de la tarde.
Matlock descubrió despué s que el presentador Bill Grundy habı́a estado
discutiendo con su productor porque no querı́a hacer la entrevista. Ası́
que no sé si se emborrachó para demostrarle a su productor que no le
importaba una mierda, o tal vez hacı́a el programa ası́ todas las noches.
De cualquier manera, é l estaba enojado, y yo tambié n: me habı́a
bebido al menos dos botellas de Blue Nun en la habitació n verde, tal vez
tres (y si hubiera habido alguna Green Nun en la habitació n azul, habrı́a
tenido eso tambié n), pero funcionó mejor para mı́ que para é l. Este serı́a
otro de esos momentos de los que no les gusta hablar contigo en
rehabilitació n, cuando la bebida o las drogas realmente te ayudan. No
digo que hubiera tenido demasiado miedo de enfrentarme a Grundy si
no hubiera bebido ese vino, pero si me diste un trago en ese momento,
fui tan audaz como la mierda, ası́ que en té rminos de hacer que las cosas
sucedan, es era una especie de herramienta de mi o icio. Responderı́a
instintivamente a las situaciones sin importarme las consecuencias.
Desde el momento en que entramos allı́, a Grundy no le agradamos.
El á ngulo desde el que venı́a se trataba de hacernos parecer estú pidos:
no tenı́a interé s en hablar con nosotros en un nivel normal. Esa era una
especie de modus operandi en esos dı́as; era el antiguo sistema de clases
britá nico funcionando con toda su fuerza. Las personas en esos puestos
(periodistas, personal de radio y televisió n) siempre te habları́an con
desdé n y tratarı́an de atraparte preguntá ndote cuá nto dinero estabas
ganando. Como si fueras un campesino cubierto de mierda que deberı́a
estar agradecido de no estar lustrando las botas del amo con tu jodida
partida de nacimiento.
Si miras las primeras entrevistas de los Beatles en aeropuertos o
donde sea, la mentalidad de los periodistas es exactamente la misma. Lo
peor de todo era que no era como si fueran un club secreto de perfectos
caballeros; Esos imbé ciles se metieron en todo tipo de jodidas
estupideces detrá s de escena y luego se cubrieron el uno al otro. Mira
toda esa mierda sobre Jimmy Savile. Rotten trató de decir la verdad
sobre é l en una entrevista de radio en 1978 y la BBC lo cerró . Ahora, en
general recomendarı́a tomar lo que dice Johnny con una pizca de sal,
pero imagı́nense la vida de muchos niñ os que no se habrı́an arruinado si
hubieran escuchado en esa ocasió n.
Sin embargo, en el programa de Grundy, la bota estaba en el otro pie.
Decidı́ incluir una transcripció n de todo porque a veces ves versiones
que hacen que lo que sucedió se debió a que Rotten dijo 'mierda'. De
hecho, juré primero, pero creo que Grundy estaba demasiado medio
cortado para escucharlo (o eso, o la palabra 'joder' le parecı́a normal
saliendo de mi boca). Inusualmente, toda la banda trabajó junta en este
(bueno, todos excepto Cookie; confı́e en que el Sr. Safe no hablará ). Glen
de alguna manera desgastó a Grundy siendo un poco arrogante y
molesto, luego Rotten lo intentó y realmente lo irritó , y inalmente llegué
con las armas grandes despué s de que el viejo só rdido comenzó a
criticar a Siouxsie (que estaba sentado en la parte de atrá s con algunas
de las personas de Bromley).
Lo gracioso de verlo todo escrito ahora es lo poco escandaloso que
parece. Prá cticamente verı́as este tipo de cosas en las noticias ahora, y
nadie realmente pestañ ea. Sin embargo, a la hora del té en ITV en Gran
Bretañ a el 1 de diciembre de 1976, esto fue, al menos en lo que respecta
a los perió dicos sensacionalistas del dı́a siguiente, prá cticamente lo má s
espantoso que jamá s habı́a sucedido. Ası́ que descá rguelo en YouTube,
relá jese con sus palomitas de maı́z y vea si está de acuerdo...
Grundy: Me dijeron que ese grupo recibió 40.000 libras esterlinas de una
compañía discográ ica. ¿No parece eso un poco opuesto a su forma de
vida antimaterialista?
Glen: No, cuanto más, mejor.
Grundy: ¿En serio?
Glen: Ah, sí.
Grundy: Bueno, entonces cuéntame más.
Yo: Nos lo hemos gastado, ¿no?
grundy: no lo se ¿Tiene?
Glen: Sí, todo se ha ido.
Grundy: ¿En serio? ¡Buen señor! ahora quiero saber una cosa...
glen: que?
Grundy: ¿Hablas en serio o solo estás... tratando de hacerme reír?
Glen: No. Se ha ido. Desaparecido.
Grundy: ¿En serio?
glen: si
Grundy: No, pero me re iero a lo que estás haciendo...
Glen: Ah, sí.
Grundy: ¿Hablas en serio?
Glen: Mmm.
Grundy: Beethoven, Mozart, Bach y Brahms han muerto todos...
Johnny: Son nuestros héroes, ¿no?
Grundy: ¿En serio? ¿Qué? ¿Qué está diciendo, señor?
Johnny: Son personas maravillosas.
Grundy: ¿Lo son?
Jhonny: ¡Ah, sí! Realmente nos excitan.
Grundy: Supongamos que encienden a otras personas...
Johnny: Bueno, eso es solo su mierda dura.
Grundy: ¿Es qué?
johnny: nada Una palabra grosera... ¡Siguiente pregunta!
grundy: no, no ¿Cuál fue la palabra grosera?
Johnny: 'Mierda'.
Grundy: ¿Fue realmente? Santo cielo, me asustas hasta la muerte.
Jhonny: Ah, está bien...
Grundy: ¿Qué hay de las chicas detrás?
Glen: Es como tu padre, en'e, este tipo, o tu abuelo.
Grundy: ¿Estás preocupado o solo estás divirtiéndote?
Siouxsie: Divirtiéndome.
Grundy: ¿Eres tú?
Siouxsi: si.
Grundy: Ah, eso es lo que pensé que estabas haciendo.
Siouxsie: Siempre he querido conocerte.
Grundy: ¿De verdad?
Siouxsi: si.
Grundy: Nos encontraremos después, ¿de acuerdo?
Siouxsie: [le lanza un beso]
Yo: Sucio cabrón. Viejo sucio.
Grundy: Bueno, siga, jefe, siga. Adelante, tienes otros cinco segundos. Di
algo escandaloso.
Yo: Sucio bastardo.
Grundy: Adelante, otra vez.
Yo: Sucio hijo de puta.
Grundy: ¡Qué chico tan inteligente!
Yo: ¡Qué cabrón de mierda!
Grundy: Bueno, eso es todo por esta noche. El otro rockero, Eamonn, no
digo nada más sobre él, volverá mañana. Te veré pronto. Espero no
volver a verte [a nosotros] de nuevo. De mi parte, sin embargo, buenas
noches.
A medida que los cré ditos avanzan sobre la melodı́a del tema, puedes
ver a Rotten mirando su reloj y a mı́ haciendo un pequeñ o movimiento
de cadera con mis pantalones de cuero, como lo habrı́a hecho Elvis con
Ed Sullivan si no lo hubieran bloqueado en la cintura. . No estoy diciendo
que este fuera el equivalente britá nico, pero ciertamente causó un mal
olor. Sabı́amos que habı́amos sido un poco traviesos, pero no nos dimos
cuenta de que habı́a salido en vivo hasta que salimos por la parte de
atrá s y todos los telé fonos comenzaron a sonar en la sala verde. Todos
estos miembros enojados del pú blico estaban llamando para decir lo
indignados que estaban. Siouxsie y yo está bamos contestando los
telé fonos y dicié ndoles que se enojaran, lo cual no hizo nada para
calmarlos.
Todavı́a estaba bastante borracho y pasá ndolo bien. Todos lo é ramos,
excepto Malcolm, el maestro manipulador de medios y creador de todo,
que se habı́a puesto blanco como el papel. Cookie solı́a decir que
Malcolm siempre hablaba de anarquı́a, pero cada vez que hacı́amos algo
un poco aná rquico, se cagaba encima, y eso era cierto. Se pondrı́a un
poco atrevido si tomara un par de tragos, pero bá sicamente era un tipo
bastante manso. Bastante justo, en esta ocasió n pensó que habı́amos
arruinado todos sus planes; y el conductor de EMI que vino a llevarnos a
casa parecı́a estar tomá ndolo muy en serio tambié n.
McLaren se animó lo su icientemente rá pido a la mañ ana siguiente
cuando descubrió que é ramos noticias de primera plana: 'The Filth and
the Fury', un loco que se suponı́a que habı́a pateado su televisor, toda
esa mierda. Cuando eso sucedió , Malcolm no tardó mucho en darse
cuenta de que todo habı́a sido idea suya en primer lugar. No me importó
eso. Ası́ era como se suponı́a que debı́a funcionar la banda: yo y/o
Johnny haciendo las cosas espontá neamente y Malcolm inventando un
mani iesto para explicar por qué fue genial despué s. Lo que me
indignaba era que un par de malas palabras que escuchabas en la calle
cada cinco minutos pudieran molestar tanto a todos. A la gente hoy en
dı́a le resulta difı́cil de entender, yo sé que sı́, pero supongo que en aquel
entonces todavı́a era un gran problema.
Mirá ndonos en la primera plana de los tabloides al dı́a siguiente, tuve
el mismo sentimiento de satisfacció n que tuve al escuchar en la radio
sobre las cosas de Bowie siendo robadas: '¡Yo hice eso!' Estaba orgulloso
de eso. Puede que no hubiera estado tan satisfecho conmigo mismo si
hubiera sabido cuá nto iba a cambiar las cosas. Grundy fue la gran lı́nea
divisoria en la historia de los Sex Pistols. Antes de eso, todo se trataba de
la mú sica, pero a partir de entonces todo se centró en los medios. En
cierto modo fue nuestro mejor momento, pero en otros fue el principio
del in.
19. VICIOSO – ME GOLPES CON UNA
FLOR
En mi opinió n, todo lo anterior a Grundy era bueno. Era como la
progresió n normal que esperarı́as de una banda: acabá bamos de hacer
un gran disco, la gente aparecı́a para vernos y se convertı́a, habı́a una
escena real. Ser reconocidos por lo que hicimos por la prensa musical
fue divertido y fue algo que pudimos afrontar. Pero de la noche a la
mañ ana está bamos en la maldita mesa de desayuno de todos y el Sun y
el News of the World nos estaban tocando en la puerta de la calle
Dinamarca.
Grundy no solo nos catapultó a un nuevo nivel de fama, sino que lo
llevó todo a otra dimensió n de una manera difı́cil de entender. No me
malinterpreten, la notoriedad fue una buena risa, y de initivamente nos
trajo muchos faná ticos nuevos muy rá pidamente. Pero la mejor manera
que se me ocurre de describir có mo se siente es como en Star Trek
cuando está n volando normalmente en el espacio, luego Scotty presiona
el botó n de velocidad warp y, ¡zas!, se van.
En té rminos de que los Sex Pistols tuvieran algú n tipo de futuro a
largo plazo, esta aceleració n repentina fue lo peor que podrı́a haber
sucedido. Sigo pensando que al inal hubié ramos crecido mucho sin é l,
pero todo el proceso habrı́a sido mucho má s lento y tal vez menos
traumá tico. Supongo que nunca fue nuestro destino ser una banda
normal que hace algunos á lbumes y luego se desvanece. Grundy fue
de initivamente el punto donde los egos de todos comenzaron a girar,
probablemente el de McLaren sobre todo.
Era tan propenso a creer en su propia publicidad como cualquiera de
nosotros, tal vez má s. Creo que nunca habı́a pensado realmente en lo
que era bueno para la banda; la idea de cuidar a sus muchachos no
estaba en su composició n gené tica como lo estarı́a para la mayorı́a de
los gerentes normales. No era uno de esos tipos de muso que juega un
juego largo como Peter Grant o Andrew Loog Oldham. Y a partir de ese
momento, la mú sica, que siempre habı́a sido lo má s importante para
nosotros, pasó a un segundo plano en lo que respecta a Malcolm. Todo
comenzó a ser sobre é l jugando el sistema.
La primera situació n de pesadilla que McLaren tuvo que tratar de
resolver fue una estrategia deliberada fue el Anarchy Tour. Por derecho,
esto deberı́a haber sido uno de los aspectos má s destacados de todo el
asunto del punk: nosotros en la cima de nuestros poderes en una gira
nacional con The Clash, The Damned (quienes tocaron sus primeros
shows apoyá ndonos en julio, y en realidad se estaban volviendo
bastante buenos en ese momento) y Johnny Thunders & the
Heartbreakers, a quienes Malcolm habı́a volado desde Nueva York para
darnos un á ngulo estadounidense. Creo que llegaron la noche despué s
de lo de Grundy, ası́ que no sabı́an en qué tipo de tormenta de mierda se
habı́an metido.
La policı́a nos prohibı́a, los ayuntamientos nos prohibı́an, todo el
mundo nos prohibı́a. Fue emocionante al principio, aparecer en todos
estos lugares y descubrir si la reunió n especialmente convocada de
todas las personas má s engreı́das de la ciudad pensaban que
deberı́amos permitirnos corromper a los jó venes de la zona con nuestra
porquerı́a punk rock. Pero se volvió aburrido bastante rá pido.
Conducı́amos por todo el paı́s en este gran autobú s de gira relá mpago, y
en todas partes nos decı́an que no podı́amos tocar, a veces en el ú ltimo
minuto. No habı́a nada má s que hacer que enojarse y causar problemas.
Incluso eso envejeció despué s de un tiempo. No se sentı́a tan
espontá neo como antes. Era como si todos tuvieran una idea de qué
esperar de nosotros, y simplemente se los está bamos dando. Por
supuesto, Malcolm estaba disfrutando todo el asunto, porque el hecho
de que nos prohibieran en todas partes hizo que la prensa fuera muy
buena, pero hubiera sido bueno tocar algunos conciertos má s tambié n.
Especialmente en la pequeñ a cantidad de shows que pudimos hacer,
como en Caerphilly, del que hay algunas imá genes realmente divertidas
en The Great Rock 'n' Roll Swindle, todos los faná ticos de la Biblia
salieron y nos dijeron que é ramos los hijos del diablo.
Cuando volvimos de esa gira, Vivienne habı́a cambiado la tienda de
Sex a Seditionaries, con todo el bombardeo de cuadros de Dresde en la
pared. Bomber Harris: ese hubiera sido un buen nombre punk; casi tan
bueno como Fabian Quest. Seguirı́a entrando allı́ despué s de eso, pero
no era tan acogedor como solı́a ser. Sacaron los sofá s y la má quina de
discos, por lo que se sintió muy clı́nico, y ya no era realmente un lugar
de reunió n. Aparte de todo lo demá s, habı́a todos esos chicos punk
dando vueltas queriendo hablar contigo, y no eran tan geniales como la
gente de Bromley, algunos de ellos eran unos completos idiotas.
Una especie de mentalidad de asedio se habı́a estado desarrollando
en la tienda durante un tiempo. Como si los Ted enojados que
amenazaban con destrozar el lugar no fueran lo su icientemente malos,
Malcolm y Vivienne se habı́an vuelto bastante paranoicos con la gente
que aparecı́a en la tienda y trataba de robar sus ideas. En realidad, no
era de extrañ ar: cuando Don Letts regresaba de Acme Attractions,
prá cticamente traı́a un cuaderno. Mucha gente de la cuarta divisió n
estaba empezando a capitalizar todo el asunto del punk. Muchacho era
lo peor: ese lugar apestaba a dos monedas. Lo mismo sucedı́a con la
mú sica; Despué s de Grundy, todos los Tom, Dick y Harry de Londres que
tenı́an una chaqueta de cuero parecı́an estar formando su propia banda
de punk.
Las multitudes tambié n se estaban adaptando a una fó rmula. En
lugar de pensar por sı́ mismos como solı́an hacerlo, las personas que
venı́an a los conciertos ocasionales a los que sı́ tocá bamos parecı́an
tener casi un có digo de conducta en mente sobre có mo debı́an
comportarse. Habı́an leı́do que escupir y hacer puñ etazos era lo que
habı́a que hacer, ası́ que lo hicieron.
Se suponı́a que Sid habı́a comenzado el pogo saltando arriba y abajo
en el 100 Club porque no podı́a ver una de las bandas. Creo que uno
probablemente entrarı́a bajo el tı́tulo de 'buenas historias que podrı́an o
no ser ciertas' (especialmente dado lo alto que era). La a irmació n de
Rotten de que comenzó a escupir probablemente fue un poco mejor,
porque tenı́a un problema con su seno nasal, por lo que siempre tenı́a
una buena limpieza, pero quienquiera que lo haya comenzado, fue
horrible. Una vez, Joe Strummer se metió por completo en la boca
abierta uno enorme de color verde y atrapó algo. Realmente era
jodidamente repugnante. Supongo que fue otra cosa que nos diferenció
de los Led Zeppelins de este mundo, pero no necesariamente en el buen
sentido.
Lo que realmente nos hacı́a especiales, que era la mú sica, parecı́a
estar quedando en el camino. El negocio de Grundy habı́a arruinado el
trato con EMI, y estaban buscando una manera de sacarnos una foto. Se
decı́a que el jefe de la discográ ica solı́a ir a cenar con la Reina y que no
querı́a volver a estar asociado con estos gamberros malhablados. En lo
que respecta a la banda, lo ú nico que todos compartı́amos era que
querı́amos hacer un á lbum con las canciones que habı́amos escrito e
interpretado en vivo; creo que ese era el objetivo principal de todos.
Pero mientras Malcolm estaba en el proceso de negociar un nuevo
acuerdo con A&M, perdimos de vista eso.
La tensió n habı́a estado aumentando entre Glen y John durante un
tiempo, y cuando tuvieron una gran pelea justo cuando Glen comenzó a
hacerle preguntas incó modas a Malcolm sobre a dó nde iba todo el
dinero, los dı́as de Matlock probablemente estaban contados. Julien
Temple dice que deshacerse de Glen y reemplazarlo con Sid fue el ú ltimo
proyecto en el que vio a Rotten y Malcolm trabajar juntos. No estoy
tratando de que Cookie y yo salgamos del apuro diciendo esto, ya que lo
aceptamos por nuestra propia voluntad, pero fue una vez en la que la
fantası́a del titiritero de Malcolm probablemente tenı́a un poco de
verdad. Ciertamente sabı́a có mo remover la olla de mierda.
Realmente no puedo precisar la naturaleza exacta de esas
manipulaciones, pero de initivamente estaban sucediendo. No se podı́a
negar que habı́a algunas buenas razones para deshacerse de Glen. A
pesar de todas las grandes contribuciones que hizo a la composició n de
canciones y al despegue de la banda, simplemente no encajaba en la
onda de los pilluelos. Rotten llamarlo 'niñ o de mamá ' fue injusto, pero
Matlock nunca se vio del todo bien. Se podı́a ver que nunca se habı́a ido
sin una comida, y habı́a comenzado a actuar como el tonto del grupo de
una manera que era bastante vergonzosa.
Al principio estaba feliz de usar ropa de Sex, pero a medida que
pasaba el tiempo parecı́a estar cada vez má s en su cosa de los Beatles, y
todo se estaba volviendo un poco doloroso. No era solo que fuera má s
respetable y mojigato que nosotros, casi se sentı́a como si pensara que
era demasiado bueno para nosotros. El hecho de que tuviera un trato
establecido para su propia banda en el momento en que se fue, y con
EMI, de todas las personas, mostrarı́a dó nde estaba su lealtad.
Ademá s de eso, a medida que construı́amos el sonido de la banda, se
estaba volviendo muy poderoso; abrumador, incluso. Esto signi icaba
que habı́a cada vez menos espacio para que Matlock jugara con sé ptimas
y undé cimas. Sin embargo, no creo que ninguno de estos factores tuviera
demasiada importancia en la mente de Johnny. Solo querı́a que su
compañ ero lo acompañ ara en el viaje para tener un poco de respaldo
contra Cookie y yo. Siempre habı́a odiado el hecho de que yo tuviera un
compañ ero en la banda y é l no. La motivació n de Malcolm fue un poco
má s difı́cil de averiguar. Para Cookie y para mı́, simplemente no tenı́a
ningú n sentido tener a alguien que no pudiera tocar una nota tratando
de llenar los zapatos de Glen, pero nunca se trató de la mú sica para
McLaren. De hecho, no le importaba una mierda. Siempre estaba en un
viaje diferente, y tener a Sid en la banda fue la má xima expresió n de eso.
No me importó tener que tocar el bajo en el á lbum, de hecho estaba
feliz de hacerlo. Pero enseñ arle a Vicious dó nde poner los dedos en el
diapasó n para que pudiera hacer algú n intento de tocar en vivo fue un
dolor total en el culo. Cookie y yo solo nos mirá bamos, como, 'Fó llame,
¿en qué nos hemos metido aquı́?'
Obviamente a los niñ os de hoy les importa una mierda que Sid no
supiera tocar el bajo. Lo aman porque se veı́a jodidamente bien. Y no
solo por su aspecto, sino por la actitud y la muerte y toda la mı́stica de
é l. Cré eme, lo entiendo. Cuando vi por primera vez a Sid caminar por
King's Road en su camino hacia Sex, esto fue antes de que Rotten se
uniera a la banda, ya era una superestrella en ciernes. Todavı́a no tenı́a
el cabello puntiagudo, pero lo llevaba corto (lo que era inusual en ese
momento) y era alto, con una gran carrera de botes y un aire
generalmente elegante a su alrededor.
Incluso entonces, é l era una mala noticia. Estaba tomando mucha
velocidad y ya conocı́a a Johnny (de hecho, obtuvo su nombre del
há mster de Johnny). Tenı́a la misma sensació n de inquietud sobre ellos
dos que tuve sobre Jordan: simplemente no te sentı́as seguro saliendo
con ellos fuera de la tienda porque llamaban mucho la atenció n sobre sı́
mismos. Cuando no estoy borracho y buscando diversió n, mi instinto
siempre es no meterme en problemas; pre iero escabullirme por mi
cuenta y ocuparme de mis propios asuntos (sin importar lo nefasto que
pueda ser ese negocio). Ponme un par de tragos dentro y eso es todo al
revé s, obviamente, pero yo no era de la clientela de clase baja que tenı́a
la costumbre de enojarse durante el dı́a.
Sin embargo, nunca era demasiado pronto para que Sid se enojara o
se drogara. Y su locura se estaba contagiando como el puto aplauso. El
dı́a que irmamos con A&M, por ejemplo, el 10 de marzo de 1977, fue
una pesadilla total. Comenzamos a beber a las ocho de la mañ ana,
simplemente bebiendo vodka en una habitació n, luego nos llevaron al
Palacio de Buckingham para hacer la irma falsa, luego fuimos a
escuchar la versió n inal de 'God Save the Queen' en Wessex Studios.
(Esta fue la ú nica parte buena, ya que no podı́a creer lo increı́ble que
sonaba: no solo porque yo era parte de eso, sino en general, como fan).
Luego tuvimos una pelea en el auto, luego fuimos a A&M y se produjo
todo tipo de carnicerı́a. Fue un jodido dı́a largo de ser empujados de un
pilar a otro y al inal todos está bamos tan enojados que no sabı́amos lo
que está bamos haciendo. En la medida en que Malcolm habı́a arreglado
todo, é l tenı́a el control, pero no tenı́a forma de saber lo que realmente
iba a pasar.
Desde el momento en que Sid se unió a la banda, nada volvió a ser
normal. Entiendo que era genial la forma en que é l y John se veı́an
juntos, y el frenesı́ de los medios sin duda vendió muchos perió dicos,
pero en lo que a mı́ respecta, los Sex Pistols no estaban destinados a ser
eso. No me habı́a importado ser el segundo violı́n de John, pero ahora
estaba jugando el tercer violı́n de este maldito idiota; tal vez incluso
cuarto si aceptabas la certeza cada vez má s delirante de Malcolm de que
todos é ramos sus tı́teres.
No era tanto que mi orgullo estuviera abollado, aunque eso era parte
de eso, era má s simplemente estar alrededor de este maldito caos. Esa
noche en el Marquee el añ o anterior, cuando John se escuchó a sı́ mismo
por primera vez, le dije al tipo de NME : 'No nos gusta la mú sica, nos
gusta el caos'. Estaba orgulloso de eso en ese momento y todavı́a es una
lı́nea cegadora, pero luego descubrı́ que no era realmente cierto.
¡Cuidado con lo que jodidamente deseas! Yo estaba en la mú sica. Todos
lo está bamos, no solo Rotten tocando su Generador Van der Graaf en
Capital Radio, sino que ahora tenı́amos caos en su lugar, y era una
mierda.
La gente de bandas má s establecidas descon iaba un poco de
nosotros desde el principio, probablemente por una buena razó n, para
ser honesto. Recuerdo que Cookie y yo está bamos en el Roxy la noche
que Jimmy Page y Robert Plant bajaron y nos dimos cuenta de que en
realidad no nos hablaban. En otra ocasió n estaba sentado en el Roebuck
con Gary Holton, que estaba en una banda llamada Heavy Metal Kids.
Vino a vernos desde el principio y su consejo fue: 'Sabes, lo que debes
hacer despué s de un espectá culo es siempre inclinarte y dar las gracias'.
Obviamente esta es una lecció n que me ha servido mucho. Gary
probablemente estaba pensando, 'Fó llame, estos cabrones groseros me
van a sacar del negocio'. No entendió que ya no era el mundo del
espectá culo; bueno, lo era, pero de otra manera.
Una vez que las cosas se pusieron en marcha con los Pistols, gran
parte de mi antiguo fanatismo se fue por la ventana. Supongo que me
estaba haciendo un poco mayor, ası́ que ya no iba a idolatrar tanto a la
gente. Pero una persona que todavı́a me emocionaba conocer era Pete
Townshend. Siempre fui un gran admirador de The Who y con é l
viniendo de Shepherd's Bush, sentı́ que tenı́amos un poco en comú n.
Lo gracioso fue que la noche en que Cookie y yo nos encontramos con
é l en el Speakeasy no é ramos nosotros los que está bamos causando
problemas, era é l. Creo que habı́a estado bebiendo todo el dı́a en una
reunió n de negocios en Tin Pan Alley, y cuando llegó a nosotros estaba
bastante iluminado. Seguı́a diciendo '¿Quié n diablos eres?' a todos y
luego atribuyó ese encuentro a la inspiració n de la canció n 'Who Are
You?', que fue su ú ltimo gran é xito antes de que Moonie muriera. Si
escuchas la letra, realmente tienes una idea de lo beligerante que era.
Hay una fotografı́a de nosotros con é l de esa noche. Para ser honesto, me
pareció un poco inspirador que incluso hablara con nosotros porque lo
querı́a mucho a é l y a su banda.
Sin embargo, no habı́a posibilidad de que ese tipo de cosas
sucedieran una vez que Sid estaba en la banda; probablemente habrı́a
amenazado con engañ ar a Pete Townshend como lo hizo con el DJ Bob
Harris. Eso fue en el Speakeasy tambié n. Creo que nos presentamos por
separado, pero en el momento en que lo vi allı́, pensé : 'Oh, mierda, esto
es una pesadilla'. Lo fue, tambié n. El apodo del tipo era 'Whispering' Bob
Harris, joder, no era un gá ngster del East End. No necesitaba un jodido
vaso que le empujara directamente a la cara de su ingeniero de sonido o
que uno de los compañ eros de Rotten amenazara con matarlo.
Dondequiera que fueras, Sid aparecı́a, sabı́as que iba a haber problemas.
El tipo de consiguió en eso. Bueno, supongo que hizo lo que no sé por
qué lo habrı́a hecho de otra manera.
Todo esto sucedió el dı́a despué s de la irma o icial con A&M, y una
vez que los abogados de Harris se comunicaron por telé fono, salimos del
sello en menos de una semana y el lanzamiento de 'God Save the Queen'
se archivó . Eso fue una decepció n, y no pudimos evitar preguntarnos si
alguna vez ı́bamos a terminar nuestro maldito á lbum. En este punto,
Malcolm tuvo la brillante idea de sacarnos del paı́s hasta que se calmara
el calor mientras buscaba un nuevo trato.
Primero fuimos a Jersey, donde nos echaron de la isla en un dı́a, y
luego a Berlı́n, que era horrible y sombrı́o, con el mismo tipo de clima
que en Londres. La paranoia de Malcolm habı́a expulsado a Nils
Stevenson en ese momento, ası́ que Boogie estaba con nosotros como
reparador de McLaren. Hay una pelı́cula de 8 mm de este viaje en alguna
parte: nos alojamos en un hotel lú gubre, hicimos turismo varias veces y
visitamos un par de clubes de transexuales extrañ os. Lo ú nico bueno
que salió fue 'Holidays in the Sun'. Esa fue mi mú sica y las palabras de
Rotten. Puedes escuchar lo enojados que está bamos en ese momento en
esa canció n. Lo curioso es que unas verdaderas vacaciones bajo el sol
podrı́an habernos animado un poco a algunos de nosotros.
Despué s de que Matlock obtuviera la bota, me presionaron para que
sacara el dedo y escribiera un poco má s. La canció n 'Bodies' fue otro
buen ejemplo. Era mi melodı́a y Rotten escribió las palabras sobre una
mujer de Birmingham llamada Pauline que estaba un poco chi lada y
llevaba su aborto en una bolsa. Fue raro. Era un pá jaro atractivo que no
se vestı́a como un punk ni nada por el estilo, parecı́a alguien que
trabajarı́a en Safeways. Recuerdo follá rmela en un callejó n de Wardour
Street. Podrı́a haber sido despué s del show de Marquee. De cualquier
manera, solı́amos atraer a estos locos hacia nosotros: era parte de lo que
le daba a la banda su cará cter especial. El ú nico problema era que ahora
tenı́amos a uno de ellos para que fuera nuestro bajista.
20. NO IMPORTEN LOS TONTEROS...
Incluso Fagin les dio a sus carteristas un techo sobre sus cabezas y una
manzana. Habı́a una mujer llamada Sophie Richmond que era la
asistente de Malcolm y dirigı́a la o icina por é l. Solı́amos acudir a ella por
los salarios; nunca cuestionamos cuá nto dinero entraba, ası́ de
estú pidos é ramos con la pasta. Está s en una banda. Es emocionante, las
cosas van bien, te está s emborrachando, te está s acostando. ¿Por qué
querrı́as sacudir el barco diciendo: '¿Dó nde está el mı́o?' Ni siquiera
tenı́a una maldita cuenta bancaria.
De todos modos, Sophie era una gran parte de la escena y parecı́a un
personaje sensato, incluso si estaba saliendo con el diseñ ador de
portadas de Malcolm, Jamie Reid, y nos ayudó a todos a encontrar un
lugar para vivir cuando la presió n en la calle Dinamarca. tengo
demasiado El primer error que compartimos Cookie y yo fue en Bell
Street en King's Cross. Cuando Sophie estaba organizando los pisos, el
que le dieron a Sid tenı́a un contrato de arrendamiento aú n má s corto
que el nuestro. Aparentemente, ella le planteó el problema a Malcolm y
é l dijo: 'Está bien, estará muerto para entonces', ası́ que tal vez é l sabı́a
el futuro.
Para ser justos con Malcolm, no era solo que é l fuera cı́nico: Sid
tambié n solı́a decir ese tipo de cosas todo el tiempo. No sé si estaba
mirando a la gente antes de que sucediera el punk. Creo que sintió que
tenı́a que actuar de cierta manera una vez que fue bautizado como Sid
Vicious. Si tan solo lo hubié ramos llamado 'Sid Kind', habrı́a estado
dirigiendo comedores de bene icencia y ayudando a ancianas a cruzar la
calle... Bueno, tal vez. A veces es difı́cil para las personas que no lo
conocieron aceptar esto sobre la base de có mo actuó en pú blico, pero
Sid tambié n tenı́a un lado dulce; una especie de cualidad infantil que
tenı́a en é l.
Aunque la llegada de Vicious fue el comienzo de que los Pistols se
torcieran y se convirtieran en un desastre, tambié n tenı́a sentido en
té rminos de la imagen que se vendı́a de nosotros en los medios. La
exageració n que atraı́a a la gente hacia la banda se debı́a a lo
escandalosos y fuera de control que é ramos, y luego trajeron a Sid para
que eso se hiciera realidad. No creo que McLaren supiera lo que iba a
pasar una vez que tuvié ramos a Sid en la banda; era má s una cuestió n de
que Sid asumiera el papel de Sid, y luego toda la publicidad que sucedı́a
y é l simplemente explotaba má s y má s. má s, en lugar de que Malcolm lo
animó especı́ icamente a ser un idiota.
De todas las personas a las que se les ocurrió todo el asunto (y
é ramos todos nosotros, incluido yo), fue la cabeza de Sid la que má s se le
ocurrió . Para ser justos, é l tambié n fue el que má s fue arrojado al fondo.
No lo habı́amos estado haciendo por mucho tiempo, pero al menos
habı́amos tenido un poco de tiempo para adaptarnos. Era un tipo
realmente cré dulo que entró cuando la locura ya estaba en su apogeo
con la presió n de pensar que era su trabajo mantenerla en marcha. En la
super icie estaba bien con eso, pero en el fondo creo que simplemente
no sabı́a qué hacer.
Al principio, al menos intentó encajar en el lado musical. Se esforzó
mucho en los ensayos y en sus primeros conciertos empezó con el bajo
muy alto para poder tocarlo, no de rodillas donde terminó en Estados
Unidos. Desafortunadamente, ese pá jaro horrible vino junto con la
heroı́na, y desde entonces todo lo que le interesaba era drogarse.
Tampoco era del todo culpa suya: nadie estaba retorciendo el brazo de
Sid para que le clavara un clavo, ni siquiera Nancy.
Nancy Spungen apareció en el primer concierto que Sid tocó con
nosotros, que fue nuestro segundo show en Notre Dame Hall en marzo
de 1977 (el primero habı́a sido con Matlock el añ o anterior). Creo que
tenı́a alguna conexió n, no hay premios por adivinar de qué tipo, con los
Heartbreakers, y las vibraciones a su alrededor eran malas desde el
principio. De repente, esta chica groupie yonqui de Estados Unidos que
era una jodida y completa extrañ a estaba dando vueltas en las pruebas
de sonido y ninguno de nosotros tenı́a prisa por aceptarla. Eso no quiere
decir que fué ramos grandes jueces del cará cter; probablemente no
habrı́amos aceptado ningú n pá jaro en ese momento, ya que la atmó sfera
alrededor de la banda se habı́a vuelto un poco má s un club de chicos de
lo que habı́a sido al principio.
Nadie en los Sex Pistols tenı́a novias en la banda demasiado, tal vez
porque sabı́an que terminarı́a follá ndomelas. Se habı́a convertido en lo
que se esperaba de mı́ en ese momento. Ası́ que, por supuesto, tomé uno
para el equipo y me follé a la vieja Nancy. Fue en la pequeñ a habitació n
en la que me quedaba a veces en la parte trasera de la casa de Helen, la
enana, a la vuelta de la esquina de Bell Street. Era divertida, Helen, tenı́a
que serlo, porque, aparte de ella, yo tenı́a un poco de prejuicio contra los
enanos; los cabrones me dieron vé rtigo. Sin embargo, me gustaba mucho
salir con ella. Nunca hubo nada sexual entre nosotros, pero ella era una
persona dulce. Iba por ahı́ y fumá bamos hierba y escuchá bamos viejas
canciones de los añ os cincuenta juntos; era una especie de lugar seguro
para mı́. Me pregunto dó nde estará ahora. Espero que esté bien.
De todos modos, volvamos a La Spungen. No sé por qué tuve que
hacerlo, follar con las novias de otras personas era solo una compulsió n
para mı́. No fue para molestar a Sid, y no creo que nunca se haya
enterado, pero no creo que se hubiera molestado demasiado incluso si lo
hubiera hecho: habı́a un tipo de energı́a bastante bisexual en é l. . Era tan
llorona que estaba desconcertado por lo que é l podrı́a haber encontrado
atractivo en ella, parecı́a tener muy poco para recomendarla como
persona. Ası́ que una parte de mı́ (y de nuevo, no hay premios por
adivinar qué parte) tenı́a curiosidad por intentar averiguarlo por mı́
mismo. Te ahorraré los detalles sangrientos, solo para probar que la
caballerosidad no está muerta.
Una persona para la que incluso menos personas parecen tener una
buena palabra que Nancy era (y es) Richard Branson. Pero no tuve
problemas con é l. Era el ú nico de todos los jefes de sello con los que
tratamos con quien realmente podı́as hablar. Todos los demá s eran solo
tipos con trajes que nunca viste, que probablemente cruzarı́an la calle
para evitarte si tus caminos se cruzaran fuera de la o icina. Aunque
Branson era un chico de la escuela pú blica, de initivamente era
accesible. Fuimos en su barco por Maida Vale y no pareció importarle
que nos burlá semos de su apariencia llamá ndolo Catweazle. Juego
limpio para é l al contratarnos tambié n, porque muchos de los otros
sellos fuddy-duddy no nos tocarı́an ni con un palo de mierda para
entonces, y si no hubiera sido por Branson, Never Mind the Bollocks...
quizá s nunca . haber encontrado un hogar.
No sé si McLaren podrı́a haber estado pensando que Branson era
alguien a quien podı́a sacarle ventaja, pero Virgin era el ú nico sello que
nos tendrı́a en esa etapa. Ellos eran los inteligentes, habı́an visto la
escritura en el Muro de Berlı́n. Lo bueno fue que nos necesitaban tanto
como nosotros los necesitá bamos a ellos, porque como compañ ı́a habı́an
tenido su gran momento unos añ os antes con Tubular Bells de Mike
Old ield y luego gastaron todo el dinero en jazz progresivo. Mierda como
Henry Cow y Steve Hillage... Ahora, habı́a alguien a quien Sid deberı́a
haber deslumbrado. El o Rick Wakeman, que hubiera sido un blanco fá cil
con esa capa suya.
Cualquiera que fuera el plan tortuoso de Malcolm, Tricky Dicky
Branson se reirı́a el ú ltimo al inundar el mercado con productos de
calidad inferior a los Pistols una vez que todo se fuera a la mierda y
McLaren estuviera fuera de escena. Pero ni siquiera le reproché eso,
porque eso es exactamente lo que se supone que deben hacer las
compañ ı́as discográ icas: capitalizar sus activos, y Malcolm lo habrı́a
hecho peor si hubiera tenido la oportunidad. Supongo que lo hizo con
The Great Rock 'n' Roll Swindle de alguna manera.
Lo mejor de Virgin fue que aprobaron nuestra elecció n de Chris
Thomas para producir el á lbum y luego nos dejaron seguir adelante, lo
que fue muy bueno para mı́ y para Cookie como mú sicos. Uno de los
factores en Never Mind the Bollocks... tener un sonido tan distintivo es
que las bandas normalmente comienzan una grabació n con la secció n
rı́tmica (bajo y baterı́a) y luego agregan la guitarra má s tarde, pero
debido a que Cookie y yo nos conocı́amos muy bien y no está bamos
jodiendo, empezá bamos con la guitarra y la baterı́a y luego ponı́a el bajo
despué s. 'Anarchy in the UK' es la ú nica canció n en ese á lbum donde
Matlock está en el bajo y somos los tres tocando juntos, pero incluso
entonces está bamos tan concentrados que no puedes escuchar mucha
diferencia.
Debido a que muchas bandas posteriores de punk y post-punk
insistieron en no poder tocar, la gente no necesariamente entiende lo
bien entrenados que está bamos. No fuimos saltando a Wessex Studios
diciendo: 'Yay, hagá moslo'. No solo nos está bamos riendo. Nunca
quisimos que nada fuera descuidado: todo el elemento punk de
'cualquiera puede hacerlo' nos habı́a pasado por alto por completo. De
hecho, Cookie y yo é ramos lo opuesto a eso: está bamos realmente
dedicados en el estudio. A veces, si arrastraba un poco el ritmo, decı́a:
'Hagá moslo de nuevo'. Y pasé muchas horas felices haciendo
sobregrabaciones de guitarra con Chris Thomas. El y el ingeniero Bill
Price siempre estaban dispuestos a experimentar para hacer las cosas
bien, hasta el punto de dejar un estuche de transporte junto al
ampli icador para "endurecer" el sonido de la guitarra. Vete a la mierda,
Phil Spector, conduciremos un tanque a travé s de tu muro de sonido y
luego construiremos uno mejor encima.
La ú nica razó n por la que todo esto fue posible fue porque Cookie y
yo nos quedamos solos. No mucho despué s de que Sid se uniera a la
banda, estuvo internado en el hospital con hepatitis durante bastante
tiempo y no podı́a hacer nada, lo cual fue realmente un regalo del cielo,
porque signi icaba que podı́a seguir tocando el bajo. Lo necesitá bamos
hospitalizado de forma permanente. Desafortunadamente, cuando
mejoró , siguió queriendo jugar. Puedes escucharlo tirarse pedos un poco
en 'Bodies', hay dos bajos en eso para asegurarnos de que uno de
nosotros lo haga bien, pero creo que esa es la ú nica canció n en la que
realmente puedes identi icarlo.
Que Rotten nos dejara en paz fue aú n má s milagroso: cuanto má s se
alejaba del lado musical y solo escribı́a letras, mejor soná bamos, y
ciertamente no necesitaba nuestra ayuda en el departamento verbal
(una vez que 'Lazy Sod' le habı́a apuntado en la direcció n correcta, por
supuesto). Nunca con iarı́a en que otras personas hicieran su trabajo ası́
ahora, es demasiado controlador.
Chris Thomas fue el mejor ejemplo posible para nosotros de có mo se
debe con igurar un entorno creativo. El escuchaba mis ideas: '¿Qué pasa
si hago esto aquı́?' – y cuando se trataba de tocar el bajo, me decı́a lo que
pensaba y yo hacı́a todo lo posible para ejecutarlo. Me divertı́ mucho
haciendo overdubs de guitarra en el estudio con é l, fue una gran
experiencia, probablemente la mejor parte de estar en los Pistols para
mı́. No hubo publicidad, nada de la locura, solo está bamos en el estudio,
injertando para hacer un gran disco.
La ú nica parte del proceso que no disfruté fue a inar las guitarras.
Esa era la ú nica parte que se sentı́a como trabajo, y Chris siempre me
obligaba a hacerlo yo mismo, lo cual odiaba. Afortunadamente, tenı́a un
sintonizador estroboscó pico que le habı́a robado, iró nicamente, al viejo
amigo y empleador del Sr. Thomas, Bryan Ferry (aunque nunca se lo
mencioné a Chris en ese momento).
Island Records tenı́a una o icina y un estudio cerca del paso elevado
de Chiswick; No sé si todavı́a está allı́. Una noche, cuando estaba
nevando, creo que habı́a estado despierto hasta la madrugada a toda
velocidad, vi un Ford Transit estacionado afuera con solo las ventanas al
inal en lugar de la puerta trasera de metal. Eso siempre fue una
incitació n. Miré adentro y vi algunas cosas sabrosas, ası́ que abrı́ la
ventana y entré . Dentro habı́a un sintonizador estroboscó pico y un disco
de oro de Bryan Ferry, para el á lbum en solitario en el que viste un
esmoquin blanco junto a la piscina en la portada como James Bond.
Obviamente, el sintonizador serı́a ú til, y no habı́a forma de que dejara
atrá s ese disco de oro. Despué s de todo, yo era un gran fan.
A principios de junio de 1977, nos tomamos un breve descanso de
nuestro trabajo para volcar algunas mesas y mear en la ponchera en la
iesta del jubileo de plata de la Reina. Virgin hizo un buen trabajo
sacando el single de 'God Save the Queen' a tiempo para eso. Para ser
honesto, nunca presté mucha atenció n a todas esas tonterı́as del jubileo.
Ese fue má s el inal de Rotten y McLaren: estaba demasiado ocupado en
el estudio para darme cuenta. Sin embargo, el concierto en el barco por
el rı́o Tá mesis fue un buen truco: una de las mejores ideas de McLaren.
No creo que tuviera nada personal contra la Reina, en realidad, solo
estaba siendo Brian Epstein, buscando golpes que pudiera hacer para
llamar la atenció n.
El in de semana en que el sencillo habrı́a llegado al nú mero uno, la
industria discográ ica arregló el grá ico para detenernos. Como si las
estaciones de radio se negaran a reproducir la canció n en caso de que
comenzara una revolució n no fuera un obstá culo su iciente para superar,
salió en la autobiografı́a de Branson que el Instituto Fonográ ico
Britá nico envió una directiva especial que obligaba a las personas que
compilaron la tabla a descontar las devoluciones de todas las tiendas
asociadas con los sellos discográ icos (la principal es Virgin, que habrı́a
proporcionado muchas de nuestras ventas), luego, misteriosamente, la
revirtieron la semana siguiente. ¿Quié n fue el bene iciario que jugó al
inal de Top of the Pops en lugar de nosotros? ¡Quié n má s sino Rod, el
puto Stewart! Juro que ese hombre me estaba acechando.
Aunque estaba cabreado por eso en ese momento, me di cuenta
despué s de que mucha gente de mierda ha llegado a lo má s alto de las
listas de é xitos, pero nadie má s ha logrado movilizar todo el poder del
negocio discográ ico britá nico para evitar que la gente conozca un single
habı́a llegado al nú mero uno. Es una insignia de honor que me
enorgullece llevar hasta el dı́a de hoy.
En té rminos de có mo el pú blico nos respondió cuando está bamos
fuera de casa, 'God Save the Queen' fue un cambio de marcha casi tan
grande como lo habı́a sido Grundy. Pero esta vez de initivamente no fue
una sacudida en la direcció n correcta. El jubileo podrı́a no haber
signi icado una mierda para mı́, pero fue un gran problema para la
comunidad racista de Teddy boy de Gran Bretañ a (que era bastante
importante en ese momento), y alentada por los medios
sensacionalistas, era una jodida temporada abierta para cualquiera que
pareciera una pistola sexual. Cookie y Rotten y varias otras personas a
nuestro alrededor fueron atacadas fı́sicamente en la calle. Tuve la suerte
de nunca tener ningú n problema en esa á rea; si veı́a a alguien poco
iable viniendo hacia mı́, simplemente me ponı́a la capa. Y el cabello de
peluquero inú til que no pude esculpir en puntas como Vicious y Rotten
probablemente tambié n me hizo un favor.
Ser asaltado por Teds y skinheads todo el tiempo no hizo nada para
acercar a la banda. No era como si tuvié ramos guardaespaldas ni nada
por el estilo, solo nos subı́amos a los autobuses y al metro como todos
los demá s, y Rotten y Vicious atraı́an tanto la atenció n por su apariencia
y comportamiento que si salı́as con ellos. se sentı́a como si te estuvieras
convirtiendo en un objetivo.
Incluso Cookie se estaba poniendo el pelo de punta en ese punto. De
hecho, me estaba quedando totalmente atrá s en el frente de la imagen.
Tenı́a que mejorar mi juego si no iba a desaparecer del radar por
completo. Ası́ que comencé a usar el pañ uelo blanco anudado en la
cabeza como un Gumby de Monty Python, para ocultar la vergü enza de
mi gran bonce sin pinchos. Lo hice primero cuando está bamos ilmando
el video de 'God Save the Queen'. El elemento de dibujos animados no se
habrı́a destacado tanto si Glen todavı́a hubiera estado en la banda, pero
pensé que si el inal del muelle era la direcció n hacia la que nos
dirigı́amos, bien podrı́a llegar allı́ primero.
Aunque el siguiente sencillo, 'Pretty Vacant', en realidad nos puso en
Top of the Pops cuando salió un mes despué s, parecı́a que, entre los
medios, la policı́a, los jodidos bastardos del GLC, todos los demá s
consejos locales de Gran Bretañ a. y Malcolm aburrié ndose: hubo algú n
tipo de conspiració n que nos impedı́a tocar en vivo en el Reino Unido.
Ası́ que nos fuimos a Escandinavia e hicimos una gira allı́. Era cierto lo
que decı́an de Suecia. No era solo lo guapos que eran los pá jaros, sino
que realmente les gustaba el sexo, a diferencia de lo que está bamos
acostumbrados, que era a regañ adientes escorias del norte con grandes
tobillos y espaldas llenas de manchas. Lo siento si la verdad duele.
Suecia y Noruega estaban locos, y luego, solo para mostrar a las
escorias del Norte a regañ adientes que no nos habı́amos olvidado de
ellos, logramos hacer algunos shows adecuados en Inglaterra. La gira
SPOTS (que signi icaba Sex Pistols On Tour Secretly) fue tan buena como
nos iba a tocar tocar en vivo con Sid en la banda. Nuestros disfraces,
todos los diferentes nombres que usamos, eran lo su icientemente
buenos para engañ ar a las autoridades, pero no tan buenos como para
dejarnos tocar en lugares vacı́os. Tax Exiles, Special Guest, Acne Rabble,
The Hamsters, A Mystery Band of International Repute: suena como un
festival al que vale la pena ir. Fue emocionante: los clubes estaban llenos
de niñ os que realmente querı́an vernos; Justo lo que deberı́a ser un
recorrido secreto. Recuerdo que Malcolm no estaba mucho por aquı́,
probablemente ocupado haciendo nuestro trato estadounidense con
Warner o jodiendo con la pelı́cula que estaba decidido a hacer, pero esos
eran tiempos divertidos. Sin embargo, Sid quedó destrozado al inal.
Cuando inalmente salió Never Mind the Bollocks, Here's the Sex
Pistols , a ines de octubre de 1977, é ramos una banda muy diferente a la
que habı́amos sido cuando se escribieron las primeras canciones, dos
añ os antes. Pero lo mejor del á lbum fue que no solo sonaba fresco, sino
que se sentı́a como el trabajo de initorio de una banda que pone en
prá ctica todas sus ideas a la vez. Le habı́a dado el tı́tulo, medio
centı́metro de un chico de perritos calientes descarado y feliz en
Piccadilly Circus a quien habı́a escuchado decir 'No importa las
tonterı́as...' unas cuantas veces cuando me dirigı́a al Soho en mis
misiones de luz roja.
De initivamente habı́a una conexió n entre mi puta libido furiosa y
có mo sonaba el á lbum. Ser un poco baterista en silencio me dio una
forma muy percusiva de tocar: ese rı́tmico djung-djung-djung-djung .
Parecı́a la cosa automá tica a hacer. No me sentı́a có moda haciendo dah-
dah-dah y luego dejando el aire. Si tomas una canció n como, por
ejemplo, 'All Right Now' de Free, hay lagunas en ella. Ahora me encanta
esa canció n, pero nunca podrı́a escribir o tocar algo ası́, porque siempre
quise seguir conduciendo, y el concepto de no hacerlo me parecı́a
realmente extrañ o. Incluso con 'Submission', donde va djung-djung dah-
dah , sigo siendo una especie de djung en el medio. Eso es lo mı́o,
simplemente no puedo dejar un agujero sin llenar.
Con el á lbum no hubo una conspiració n comercial discográ ica para
mantenernos fuera de las listas de é xitos (aunque una tienda de discos
Virgin fue demandada por mostrar la palabra 'Bollocks', como si fuera
una versió n comercial de lashing). De hecho, ganaron el caso.
Obtuvimos nuestro nú mero uno por in, y parecı́a apropiado que los Sex
Pistols deberı́an haber establecido un precedente legal para las
personas que muestran sus cojones en pú blico. Lo celebramos haciendo
un par de espectá culos especiales el dı́a de Navidad para los bomberos
en huelga en Hudders ield, una matiné para los niñ os y luego un
espectá culo adecuado por la noche. Hay algunas fotos divertidas de esa
tarde de Sid con los niñ os, como si ambos lados estuvieran tratando de
averiguar cuá l es el niñ o má s grande.
Estaba bastante oscuro a su alrededor en ese momento, incluso si no
lo parecı́a cuando todos esos niñ os estaban tirando pasteles. El
problema tambié n comenzaba a surgir en té rminos de tensiones entre
Rotten y Malcolm, entre Cookie y yo y los otros dos, e incluso entre Sid y
Rotten, quienes tampoco se llevaban muy bien. Una vez que el brillante
plan de Malcolm para secuestrar a Nancy y obligarla a regresar a
Estados Unidos fracasó , Sid estaba prá cticamente perdido por la
heroı́na, y John tenı́a un gran problema con eso. Sin embargo, no parecı́a
que la escritura estuviera en la pared todavı́a, y no tenı́amos idea cuando
tocá bamos que el concierto para los bomberos serı́a nuestro ú ltimo
concierto en el Reino Unido y que al inal de la breve gira
estadounidense estuvié ramos a punto de continuar, la banda se habrı́a
disuelto.
Al principio se nos negó la entrada a los EE. UU. por razones de visa,
estaban tratando de salvarnos de nosotros mismos. Nuestra pila de
condenas penales (todos tenı́amos algunas, pero yo tenı́a la mayorı́a)
signi icaba que Warner Brothers tenı́a que pagar una gran cantidad de
dinero al gobierno estadounidense como ianza para garantizar nuestro
buen comportamiento. Apostar a los Sex Pistols para mantener la paz en
ese momento era como respaldar a un chihuahua de tres patas para
ganar el Grand National, no la mejor inversió n que jamá s harı́an, y
Warner envió a este tipo de la compañ ı́a discográ ica llamado Noel Monk
para protegerlo. .
Esa gira fue un jodido circo completo desde el principio: creo que la
pareja de veteranos de Vietnam que Warner asignó para hacer la
seguridad de Sid desearon volver a luchar en la jungla al inal. Entonces
é ramos una gran noticia en Estados Unidos, y habı́a tanta gente
siguié ndonos tratando de obtener exclusivas, lo que, por supuesto, Sid
estaba encantado de proporcionar, que todo fue una locura. Casi tan
pronto como llegamos, la revista High Times lo ilmó inyectá ndose en
una habitació n de hotel. Eso fue su iciente para sacarnos del paı́s por sı́
solos, pero de alguna manera fue aplastado por Warner Brothers. Es
increı́ble lo que pueden sacarte cuando les está s ganando dinero.
Mientras tanto, Malcolm todavı́a estaba en su viaje de querer que no
seamos como ninguna otra banda, ası́ que en lugar de tocar en Nueva
York o Los Angeles, donde habrı́a habido un gran revuelo, tuvimos que
tocar todos. estos malditos lugares de vaqueros como Texas y Atlanta.
Tal vez esto era una buena idea en teorı́a, pero en la prá ctica signi icaba
que todos los malditos paletos locos golpeando la Biblia venı́an a
tirarnos animales muertos. Obviamente, ese tipo de cosas no molestaron
a McLaren, porque nunca tuvo que subir al escenario y lidiar con eso,
pero fue lo peor, hombre.
Podrı́amos haberlo superado si los cuatro pudié ramos haber
formado un frente unido. Pero la banda se estaba dividiendo en dos
bandos porque Cookie y yo no podı́amos soportar estar má s cerca de
Johnny y Sid. No podı́as darte la vuelta por un minuto sin que Sid
comenzara una pelea con un vaquero en un bar o rompiera su bajo en la
cabeza de algú n tipo. Solo intentá bamos salir adelante y é l estaba
ocupado siendo Sid Vicious y haciendo la vida imposible para todos.
Luego, ademá s de eso, estaba Rotten, que estaba en su propio viaje y
bá sicamente pensó que era Dios en ese momento. Incluso Sid le habı́a
perdido el respeto con sus atuendos y sus sombreros tontos. Habı́an
sido compañ eros al principio, pero desde el momento en que Vicious se
unió a la banda, se distanciaron el uno del otro. Supongo que hubo un
poco de rivalidad allı́, y discutieron sobre Nancy y la heroı́na. Rotten
siempre se queja de los drogadictos, pero los efectos del exceso de
alcohol son igualmente terribles.
Odiaba volar, pero cualquier cosa era mejor que estar atrapada en el
autobú s con esos dos. Todo fue una pesadilla tan horrible que lo
bloqueé . Cookie dice que el avió n en el que ı́bamos fue alcanzado por un
rayo cuando se dirigı́a a Memphis y ni siquiera recuerdo eso. Cuando
llegamos a San Francisco al inal de la gira, tenı́a gripe. El Winterland
parecı́a un gran lugar para un espectá culo de rock 'n' roll adecuado, no
como los palacios de mierda en los que nos habı́an reservado hasta
entonces. Desafortunadamente, é ramos horribles. Mis guitarras estaban
todas desa inadas ya que habı́a comprado este maldito Firebird que era
una mierda, y Sid estaba siendo un completo payaso. Mirá ndolo desde el
punto de vista de la audiencia, tal vez pensaron: 'Vaya, esto es salvaje,
esto es una locura', pero desde mi punto de vista, está bamos
completamente jodidos.
Un montó n de nuevas bandas punk de la Costa Oeste como The
Avengers y The Nuns tocaron antes que nosotros. Deberı́a haber sido
emocionante pensar que está bamos inspirando a todas estas bandas a
formarse en Estados Unidos de la misma manera que lo hicimos con The
Clash y The Damned en casa, pero no creo haberlos escuchado tocar una
nota. No podrı́a haberme importado menos la mú sica para entonces.
Estaba demasiado ocupado concubrié ndolo detrá s del escenario.
Fui a la ciudad en el hotel Miyako despué s del espectá culo esa noche.
A pesar de que tenı́a gripe, ninguno de la cinta transportadora de
pá jaros que pasaban por mi habitació n -entra, chupa eso y muchas
gracias- parecı́a estar preocupado por contagiarse (o cualquier otra
cosa). Perdı́ la cuenta de cuá ntas habı́a pero digamos que eran seis
porque esa es la cantidad de cá maras que hay en una revista, y este Sex
Pistol acababa de disparar su ú ltima bala.
La presió n era demasiada, ası́ que hice lo que siempre hacı́a: huı́.
Rotten ha tratado de tergiversar lo que sucedió a continuació n para que
pareciera que rompió la banda, pero amaba a los Pistols y realmente
querı́a que siguié ramos. Su plan era que nos deshicié semos de Malcolm
y continuá ramos. Mirando hacia atrá s, tenı́a razó n en cierto modo,
porque el ego de McLaren estaba destruyendo todo, pero cuando se
trataba de elegir entre nuestro manager y nuestro cantante, solo habı́a
un lugar donde mi lealtad y la de Cookie podı́an estar.
Por mucho que Malcolm se haya convertido en una pesadilla, seguı́a
siendo una gran parte de todo el asunto y no podı́amos simplemente
deshacernos de é l. Me habı́a estado quedando en su casa durante añ os
antes de que los Pistols despegaran, y lo consideraba un aliado y un
amigo. Ademá s, Malcolm nos estaba dando la oportunidad de hacer lo de
Ronnie Biggs en Brasil y terminar la pelı́cula The Great Rock 'n' Roll
Swindle , por lo que está bamos muy emocionados. Ciertamente, parecı́an
opciones mucho má s atractivas que despedir a Malcolm y tratar de
hacer que los Pistols funcionaran con Rotten y Sid, que para entonces
estaba tomando una sobredosis cada cinco minutos. Al inal del dı́a, todo
se reducı́a a con quié n nos sentı́amos má s có modos pasando el tiempo, y
eso era una obviedad. Ası́ que Cookie y yo nos fuimos a Rı́o a divertirnos
con un Gran Ladró n de Trenes, Lydon fue a Jamaica con el dó lar de
Branson para descubrir el reggae, y Sid y Nancy obtuvieron un boleto de
ida a su propio in ierno pú blico de drogadictos.

É
PARTE III: DESPUÉS
21. LOS CHICOS DE BRASIL
Cookie y yo lo pasamos muy bien en Rı́o. Solo estar lejos en algú n lugar
nuevo y no tener que lidiar con Rotten y Sid y todos los malditos iascos
diarios fue un gran alivio. Hacı́a sol, era tropical, era genial. Ademá s,
nadie en Brasil sabı́a quié nes eran los Sex Pistols en ese entonces, ası́
que la presió n de que todos nos amaran o nos odiaran todo el tiempo se
nos quitó de los hombros desde el momento en que llegamos.
Tambié n fue divertido pasar el rato con Biggsy: era solo un tipo
normal que intentaba estar a la altura del mito. Supongo que tenı́amos
má s en comú n con el notorio Gran Ladró n de Trenes de lo que nos
dimos cuenta en ese momento. Aunque Ronnie era libre, en cierto modo
era un prisionero. La ú nica razó n por la que se le permitió quedarse en
Brasil fue porque tenı́a un hijo allı́, y tenı́an esta extrañ a regla de que,
por ser un delincuente, no se le permitı́a trabajar. Entonces, la ú nica
forma en que podı́a ganar dinero era con los turistas ingleses que
querı́an ir a visitarlo. Era como el Saló n de la Fama del Rock & Roll, solo
para delincuentes.
Estuvimos un par de veces en Biggsy's gaff cuando aparecieron los
turistas. Este pequeñ o autobú s rojo vendrı́a a toda velocidad a su puerta,
é l bromearı́a con ellos por un rato, tal vez les darı́a una cerveza, ellos
tomarı́an una foto, alguien le darı́a un poco de dinero y luego se irı́an a la
mierda. No sé cuá nto sacó de eso, probablemente no mucho, pero me
gustó la forma en que manejó todo el asunto. El era divertido.
De hecho, me estaba divirtiendo tanto que cuando terminamos de
ilmar y Cookie y todos los demá s se fueron a casa, me quedé un par de
semanas má s. Fue relajante estar sola en el hotel durante esa quincena.
Solo sé una palabra de portugué s, obrigado , es 'por favor' o 'gracias',
una de las dos, pero eso fue má s que su iciente para salir adelante.
Volviendo a Londres a inales del invierno de 1978, caı́ al suelo con
un jodido estré pito. Supongo que podrı́amos haber tratado de arreglar
las cosas con Rotten, enderezar a Sid y volver a escribir algunas cosas
nuevas. Pero Sid era un desastre para entonces como para estar limpio,
Malcolm y Johnny se odiaban tanto que ni siquiera podı́an estar juntos
en una habitació n, y el ú nico intento que habı́amos hecho de escribir
una canció n en los ú ltimos meses de Sex Pistols habı́a sido Sid trayendo
'Belsen Was a Gas' a la mesa.
Eso fue un remanente bastante rancio de su primera banda The
Flowers of Romance. Hay una foto de nosotros tocando el riff juntos y
cuando miro esa foto puedo recordar haber pensado, 'Oh hombre, esto
no es bueno, de hecho es una mierda'. Simplemente se sintió como,
'¿Cuá l es el maldito punto?' Habı́an pasado demasiadas cosas para que
alguien dijera: 'Oh, escribamos algunas canciones y hagamos otro
á lbum'. Esos dı́as se habı́an ido y no iban a volver.
El mejor momento para estar en Sex Pistols fue antes de Grundy,
cuando está bamos escribiendo las canciones que terminaron en Never
Mind the Bollocks . En ese momento no é ramos famosos y todos é ramos
iguales. No habı́a tantos egos alrededor... bueno, los habı́a, pero las
tensiones entre Glen y John o Paul y John y yo estaban dando energı́a a
las canciones. Ya fuera yo tocando los acordes Beatle de Glen, o John
luchando para hacerse oı́r sobre mı́ y Paul, o los cuatro contra Malcolm,
las luchas dentro de la banda estaban tomando una forma creativa. Es
por eso que no hubo arreglo para los problemas que inalmente nos
destruyeron, porque fueron las mismas cosas que hicieron que la banda
funcionara en primer lugar.
Esa es tambié n la razó n por la que, cuando miras el maldito
panorama general, todo fue perfecto tal como fue: principio, medio y
inal. No tiene sentido tratar de diseccionar todo, diciendo: 'Oh, si Glen
se hubiera quedado en la banda en lugar de traer a Sid, podrı́amos haber
hecho esto o aquello'. Tal vez la quı́mica nos hubiera sostenido para
hacer otro á lbum si Matlock se hubiera quedado, pero no era nuestro
destino tener una fase progresiva en la que hicimos un disco folk y nos
fuimos de gira con Barclay James Harvest. Los Sex Pistols nacieron para
estrellarse y arder, y eso es exactamente lo que hicimos.
Supongo que la ú nica lecció n que podrı́as aprender de todo esto serı́a
con iar en con quié n está s y no tratar de ser demasiado controlador,
porque la magia siempre fue la parte que ninguno de nosotros podı́a
controlar. Simplemente no sabı́amos có mo manejar lo grandes que nos
volvimos despué s de Grundy, de verdad. Eramos como esos jodidos
idiotas que ganan las quinielas de fú tbol, luego gastan todo el dinero y
terminan suicidá ndose.
La grati icació n instantá nea, siempre una de mis debilidades, fue una
gran parte del problema. No tanto en las á reas tradicionales de sexo y
drogas (aunque obviamente tampoco nos contenı́amos), como en
té rminos del tipo de cosas que harı́amos para llamar la atenció n. Una
vez que algo que sucedió espontá neamente en la televisió n causó tanta
indignació n, se convirtió en un juego. Era como si tuvié ramos las llaves
de la maquinaria: 'Si hacemos esto, saldremos en primera plana', y todo
el asunto perdió su inocencia.
La sensació n de que é ramos una banda real fue arrastrada por una
avalancha de tonterı́as sensacionalistas. Malcolm se obsesionó cada vez
má s con el elemento circense en detrimento de la mú sica -ası́ fue como
Sid acabó en la banda-, pero todos é ramos culpables de ello. Recuerdo
una vez en algú n lugar de Europa, podrı́a haber sido Amsterdam o
Luxemburgo, no sé , no llevaba un diario, donde me follé a esta vieja
gorda de uno de los grandes trapos de Fleet Street porque sabı́a que ella.
Me darı́a una buena difusió n en el perió dico si lo hiciera. Allı́ estaba yo
en la pá gina unos dı́as despué s, el joven semental corriendo por el
bosque con estas botas y una camiseta puesta, y luego me sentı́ un poco
avergonzado.
Fue vergonzoso, hombre, y ese lado de las cosas empeoró con el paso
del tiempo. Recuerdo ir al restaurante Palm en Los Angeles con Malcolm
despué s de que los Pistols se separaran. Su ego habı́a estallado en ese
momento, ası́ que todo lo que hacı́a era pensar en acrobacias
supuestamente escandalosas para obtener má s publicidad, y en esta
ocasió n, me instigó a jugar con estas langostas en el restaurante con la
esperanza de que cuando salié ramos hubiera alguna gran cosa
paparazzi. Y habı́a, un poco, pero no mucho.
Desafortunadamente, el impulso de demostrar que era un maestro
manipulador resultó ser lo que impulsó a McLaren tambié n en lo que
respecta a The Great Rock 'n' Roll Swindle . Russ Meyer habı́a sido y se
habı́a ido como director incluso antes de que nos fué ramos a la gira
americana. Creo que fue su nombramiento lo que le dio a John una mala
sensació n de que todo se dirigı́a má s a una direcció n de 'continuar'
desde el principio, y é l estaba totalmente deprimido en el proyecto a
partir de ese momento. Todo lo que sabı́a era que este tipo hacı́a
pelı́culas sobre pá jaros con grandes tetas y eso me sonaba genial.
Al inal resultó que, una vez que Julien Temple se hizo cargo, terminé
teniendo que llevar toda la pelı́cula interpretando el papel del detective
que estaba tratando de averiguar a dó nde se habı́a ido el dinero. Ahora
se podrı́a decir, y John probablemente dirı́a, que estaba ayudando a
Malcolm a hacer que todos quedá ramos como idiotas al hacer esto, pero
en lo que a mı́ respecta, nadie que supiera algo sobre lo que realmente
habı́a sucedido estaba tomando en serio nada de lo que dijo McLaren.
ese momento. Ciertamente no iba a ganar ningú n Oscar por su
actuació n. Era tan incapaz de aprender sus lı́neas que tuvieron que
escribirlas en pedazos de papel y dejarlas pegadas en cosas fuera del
alcance de la cá mara. Es por eso que sus ojos siguen movié ndose en
direcciones extrañ as en esa escena tonta donde está en el bañ o y la chica
desnuda está de pie allı́.
Encontré que aprender lı́neas era mucho má s fá cil que Malcolm, a
pesar de no poder leer o escribir correctamente, y disfruté del lado de la
actuació n. Sin embargo, eso no signi icaba que la estaba pasando bien en
general. Habı́amos sido la comidilla de la ciudad durante los ú ltimos
añ os y habı́a mucha emoció n a nuestro alrededor, luego, de repente,
todo terminó . Filmar The Great Rock 'n' Roll Swindle se sintió como un
salvavidas, pero mirando hacia atrá s probablemente empeoró las cosas.
Todas las cosas en la pelı́cula donde estamos audicionando a Edward
Tudor-Pole y un montó n de otros cantantes para reemplazar a Rotten,
por ejemplo... Supongo que esa fue la forma en que Malcolm le mostró a
Johnny que la banda no lo necesitaba, pero ¿qué ? en realidad mostró que
era lo contrario.
Recuerdo subir al escenario con Tenpole Tudor un par de veces en el
Hope & Anchor, borracho hasta la mé dula. Cookie y yo hicimos algunas
canciones juntas para la banda sonora, como 'Frigging in the Rigging' y
'Silly Thing', donde hay dos versiones diferentes conmigo cantando en
una y Cookie cantando en la otra. Por supuesto, mi versió n es mejor,
pero la suya tampoco es mala: tiene una vibra divertida y la canció n
terminó siendo uno de nuestros mayores é xitos. Aú n ası́, cuantos má s
discos salı́an con nuestros nombres y tenı́an é xito, má s obvio era que la
banda habı́a terminado.
Me alejé de Johnny y Sid en San Francisco porque parecı́a que no
valı́a la pena estar má s cerca de su locura, pero solo me tomó unos
meses despué s del inal de la banda hasta que me encontré con mi
propia locura. . Uno pensarı́a que estar cerca de Sid en ese momento
habrı́a sido su iciente para alejar a alguien de la heroı́na de por vida,
pero no resultó ası́. Siempre habı́a tenido una sensació n de vacı́o dentro
de mı́ que supongo que la banda me ayudó a llenar. Pero una vez que
todo eso desapareció , el enorme agujero se abrió aú n má s y la droga
encajaba perfectamente en é l.
Supongo que si no hubiera tenido acceso a la heroı́na, probablemente
habrı́a aumentado el consumo de alcohol. Recuerdo que Cookie y yo nos
bañ á bamos con bastante regularidad para mantener a raya el miedo y la
soledad cuando tenı́amos que hacer todas estas irmas de discos de
Virgin por nuestra cuenta en el norte alrededor del lanzamiento de 'Silly
Thing', pero ¿por qué tomar un Uber de adicció n cuando una limusina
con chofer está disponible?
Lo extrañ o era que habı́a consumido heroı́na un par de veces
mientras estaba en los Pistols y no me gustó ninguna de las dos: una en
mi cumpleañ os en Parı́s y otra con Johnny Thunders en el apartamento
de Leee Childers en Wardour Street en Soho. Ciertamente no era uno de
esos adictos a la heroı́na que la tiene por primera vez y piensa: 'Oh, esto
es todo para mı́'. De hecho, en ambas ocasiones recuerdo haberlo
inhalado, vomitado despué s y no haberme gustado mucho la sensació n.
Debo decir en este punto que la heroı́na no era tan conocida entonces
como lo es ahora. Realmente no me habı́a encontrado con eso, mientras
crecı́a, cuando eran principalmente los toffs los que se drogaban y
fumaban, y las drogas callejeras eran la velocidad, el hachı́s, el alcohol y
los tranquilizantes. Supongo que Nick Kent fue una de las primeras
personas con las que me encontré que sabı́a que lo estaba haciendo,
pero sentı́ que era má s una pose, en la que ingı́a cabecear para
parecerse (aú n) má s a Keith Richards. La percepció n en ese momento
era que, en té rminos de punk, era realmente la gente de Nueva York,
especı́ icamente Johnny Thunders & the Heartbreakers, quien lo trajo.
Eso fue ciertamente cierto (a travé s de Nancy) de Sid, y tambié n habı́a
un elemento de verdad en lo que a mı́ respecta.
¿Me atrajo esa cosa genial del drogadicto de Nueva York? Johnny fue
muy in luyente en cuanto a mi forma de tocar la guitarra, y cuando lo
conociste, era muy há bil y tenı́a mucho carisma. ¿Pero comencé a tomar
heroı́na porque querı́a ser como é l? No me parece. Me gustaban los
Heartbreakers, eran una gran banda de rock 'n' roll en vivo, pero no creo
que me diera cuenta en ese momento hasta qué punto eran yonquis y
toda su vida consistı́a en tratar de drogarse todo el tiempo. Ese no harı́a
clic hasta que fuera demasiado tarde y yo estaba peligrosamente cerca
de estar en la misma posició n. Por el momento, la heroı́na era solo otra
medicina, como lo habı́an sido el robo y el sexo, que podrı́a evitar que
tuviera que lidiar con la realidad.
El momento en que me di cuenta de que estaba en problemas fue en
el set de The Great Rock 'n' Roll Swindle , ilmando con la estrella porno
Mary Millington en el Rainbow en Finsbury Park. Mary parecı́a una chica
dulce, pero estaba muy jodida: estarı́a muerta antes de que saliera la
pelı́cula, al igual que Sid. Para entonces, habı́a estado esnifando heroı́na
todos los dı́as durante unos seis meses, pero por alguna razó n esa
mañ ana salı́ de casa sin ella. Cuando llegué allı́ pensé : 'No me siento
bien, ¿qué me pasa? … ¡Oh, mierda! Me separé de inmediato, volvı́ a mi
departamento, tomé un poco de droga allı́ y me sentı́ mejor de
inmediato.
Era un sentimiento horrible, ser dependiente de esa manera, pero se
sentı́a demasiado poderoso para luchar contra é l. Todo lo que recuerdo
haber pensado fue: 'Aunque no quiero, voy a ir por este camino y no hay
nada que realmente pueda hacer al respecto'.
Hice un par de intentos a medias para poner los frenos. Escuché que
Pete Townshend habı́a hecho este tratamiento de caja negra en el que te
pones almohadillas detrá s de las orejas y las presionas cada vez que
quieres drogas. Era una especie de acupuntura, pero cuando fui a la
o icina de esta mujer en Bayswater y probé , los estaba presionando cada
maldito segundo. Era una broma, de verdad. Tambié n traté de comprar
metadona en la calle, pero era una mierda aguada que no funcionó .
Cookie vio lo que estaba pasando y trató de ayudar, pero eres impotente
ante otras personas en esa situació n. No puedes detener a nadie que no
esté listo para hacerlo por sı́ mismo, y tuve unos buenos añ os de
adicció n por delante antes de llegar a ese punto.
El gran paso hacia arriba, desde el segundo nivel de idiotas
drogadictos hasta la má xima categorı́a, es obviamente cuando
comienzas a inyectarte. Supongo que se podrı́a decir que los
Heartbreakers jugaron un papel inspirador en esto para mı́, pero solo
porque uno de los dos tipos que me iniciaron (en realidad, el mismo tipo
que llevó a Nancy a vernos a Notre Dame Hall esa vez, sı́, salud ,
compañ ero) pensó que era un doble de Johnny Thunders. Sus padres
eran dueñ os de un hotel en Kensington High Street y é l y su compañ ero,
un tipo negro llamado Barry, vivı́an en este piso a la vuelta de la esquina.
En ese momento, habı́a estado esnifando droga, pero solo esnifá ndola,
porque aú n no sabı́a lo que era disparar, durante lo que pareció un añ o.
Estaba pasando el rato con ellos una noche cuando cogieron un poco y
se dispararon. Parecı́a que se lo estaban pasando mejor que yo, ası́ que
dije: '¡Hazlo, carajo!' Entonces odiaba las agujas, pero todo terminó
desde el momento en que esa cosa estuvo dentro de mı́. Cuando inhalas
heroı́na, toma un poco de tiempo llegar a ti, pero la rá faga instantá nea
de esto fue como una solució n completamente diferente en sı́ misma.
Está en tu torrente sanguı́neo de inmediato y es como, ¡golpe! Dos
minutos despué s, está s en coma.
Sin embargo, no fue la primera vez que tuvo suerte en todos los
aspectos. Esta fue la ú nica vez que compartı́ una aguja y estoy bastante
seguro de que logré contraer la hepatitis C, pero eso no se notó durante
algunos añ os, y como no iba a los mé dicos para chequeos generales de
salud , tomó mucho tiempo para que llegaran las malas noticias. ¡No
compartan agujas, niñ os! Ahora, ¿quié n dice que este libro no tiene un
mensaje de salud pú blica responsable?
Mientras tanto, estaba enganchado. Lo má s desmoralizador de todo
era que la forma de comprar droga en el Reino Unido en ese momento
era yendo a la casa del tra icante. Ası́ que tenı́a que sentarme en la sala
de estar de este miserable hippie escuchando a Yes y Genesis durante
seis horas solo para obtener un poco o, a veces, incluso unas pocas
migajas de droga. ¡Qué indignidad! Los Sex Pistols estaban destinados a
deshacerse de toda esa mierda, y ahora allı́ estaba yo, una audiencia
cautiva para el jodido Rick Wakeman...
22. SIOUXSIE POR CIERTO
Mi ascenso a la liga principal de drogadictos se produjo en las ú ltimas
etapas de la ilmació n de The Great Rock 'n' Roll Swindle . Si ser el niñ ero
de Sid durante la grabació n de 'My Way' en Parı́s no iba a desanimarme,
supongo que nada lo harı́a. Ese viaje fue má s que una maldita pesadilla.
Ası́ que Sid se va a Parı́s con Nancy, y tiene seis botes grandes de
metadona que se llevará con é l. Supongo que lo está obteniendo
legalmente ahora porque está tratando de dejar esa vieja rutina. De
todos modos, está n ilmando allı́ y de alguna manera me metı́ en la
mezcla para ir y ser el director musical en este pequeñ o estudio con
estos chicos de sesió n franceses. En ese momento, estar cerca de é l y de
ese pá jaro estaba un poco por debajo del in ierno en la tierra como un
lugar en el que te gustarı́a estar. Para ser justos con Sid, estaba
totalmente fuera de sı́, y la metadona es una droga repugnante. Escuché
que a los nazis se les ocurrió , aunque no sé si eso es cierto. De cualquier
manera, debido a que lo bebes en forma lı́quida, no tiene un impacto tan
inmediato, pero dura mucho má s. Como resultado, en realidad es má s
difı́cil de dejar que la heroı́na.
De todos modos, mientras Sid estaba ocupado trepando las paredes,
hice que estos muchachos cortaran la vı́a. Creo que el plan original era
que lo hiciera despacio todo el tiempo, pero una vez que nos dimos
cuenta de que probablemente no iba a suceder, acelerarlo era la ú nica
forma de hacerlo. La forma en que la parte tonta entra en tiempo con el
bajista salió bien al inal, y para su cré dito, Sid apareció para la voz.
Cuando me llevé el má ster a Inglaterra, estaba bastante orgulloso de lo
que resultó ser mi primer cré dito como productor. En estos dı́as siempre
me rı́o al inal de la pelı́cula Goodfellas , donde mi nombre es la ú ltima
palabra que ves en la pantalla.
Todavı́a no creo que me hayan pagado por producir 'My Way', para
ser honesto, pero se sentı́a bien estar haciendo algo nuevo. Una vez que
Malcolm consiguió que un tipo escribiera tablas de cuerdas y pusieran la
orquesta, sonaba bastante bien. Desafortunadamente, para entonces yo
mismo habı́a empezado a ir cuesta abajo con el golpe, ası́ que no estaba
tan interesado como deberı́a haber estado. Dejé eso por un tiempo
cuando recibı́ la llamada para ir a San Francisco y trabajar con Los
Vengadores y Joan Jett, pero estaba fumando mucha hierba y bebiendo
demasiado para llenar el vacı́o cuando estaba allı́. , en la medida en que
bien podrı́a haber estado en la jodida heroı́na la mitad del tiempo.
De hecho, estaba trabajando con Los Vengadores cuando recibı́ la
llamada para decirme que Sid habı́a muerto. Obviamente, Nancy se le
habı́a adelantado para ver si podı́a encontrar una conexió n en el má s
allá . Sé que sonará oscuro, pero fue una é poca oscura. No tengo
conocimiento interno de lo que les sucedió a ninguno de ellos, pero fue
jodidamente sombrı́o. Cuando me dijeron que Sid habı́a muerto, no tuve
muchos sentimientos al respecto. No tenı́a muchos sentimientos sobre
nada en esa etapa, para ser honesto, ası́ que cuando un tipo de Rolling
Stone me llamó , solo dije lo primero que me vino a la cabeza, que fue:
'Bueno, al menos venderemos algunos discos ahora.
En retrospectiva, probablemente fue una respuesta estú pida, y me di
cuenta de que el tipo estaba sorprendido. Pero tambié n fue algo muy Sex
Pistols que decir, que de una manera extrañ a, ya que la idea de la banda
signi icaba tanto para é l como para cualquiera de nosotros, era quizá s lo
que Sid hubiera querido. Má s tarde, me sentı́ triste por lo que pasó ,
especialmente por hablar con su madre, con quien me llevaba bastante
bien. Sid no era un idiota, era un tipo bastante inteligente, pero una vez
que estuvo en la banda, la ló gica de su situació n lo empujó por un
camino muy oscuro. Como he dicho, si lo hubié ramos llamado Sid Kind o
Sid Gentle, podrı́a haber tratado de estar a la altura de eso, pero no creo
que todavı́a esté en tantas camisetas.
Creo que John carga con mucha culpa hasta el dı́a de hoy por la
muerte de Sid, a pesar de que está enterrado tan profundamente en su
cabeza que no siempre reconoce que es eso. Pero no creo que Lydon
merezca má s culpa por lo que le pasó a Sid que cualquier otra persona.
Era su propia responsabilidad có mo eligió joder su vida. A veces el
destino es un hijo de puta y eso es todo.
Con la muerte de Sid, inalmente quedó claro para todos, incluso para
Malcolm, que la banda habı́a terminado. ¿Se sintió raro no ser má s un
Sex Pistol? Bueno, siempre está s asociado con eso, y supongo que mi
imagen de mı́ mismo en ese momento era que todavı́a tenı́a que actuar
de cierta manera, incluso si realmente no querı́a hacerlo. Mi tiempo en la
banda se sentı́a tan cerca que aú n no sabı́a quié n iba a ser si no iba a ser
eso. No serı́a hasta mediados o inales de los ochenta, cuando me fui a
Los Angeles y me puse sobrio, me dejé crecer el pelo y comencé a andar
en moto y a escribir canciones tranquilas, que comencé a encontrar otra
forma de ser.
Rotten fue lo su icientemente inteligente como para comenzar ese
proceso de inmediato, abandonando su nombre punk y volviendo a ser
el viejo John Lydon en el momento en que comenzó a hacer Public Image
Ltd. La otra cosa que fue lo su icientemente inteligente como para hacer
fue llevar a Malcolm a los tribunales. Esto fue difı́cil para mı́ al principio,
porque todavı́a era amigo de McLaren y no querı́a tener que ponerme
del lado de John contra é l. Cuando los receptores se conectaron y
descubrieron el desastre que eran todas las inanzas, fue realmente
deprimente, pero cuanto má s pasaba el tiempo, má s claro se hacı́a que
tenı́a que hacerlo, y felicitaciones a Rotten por hacerlo. Le doy mucho
cré dito por tener las pelotas para tomar esa iniciativa.
Obviamente, lo estaba haciendo por su propio bien y no por el mı́o y
el de Cookie, pero a la larga tambié n nos bene ició a nosotros. Los
tribunales tardaron seis o siete añ os en resolver todo el asunto, pero el
problema bá sico era que Malcolm habı́a gastado dinero en la pelı́cula
que deberı́a haber sido nuestra. Ya sea que lo vea como un robo directo,
como lo hizo John, y aú n lo hace, o adopte la opinió n má s comprensiva
de que si McLaren fuera solo un ladró n, habrı́a robado el dinero para sı́
mismo en lugar de hacer The Swindle , el hecho es que esto no era su
llamado a hacer. Y si no nos hubiera cosido haciendo que su propio
abogado hiciera todos nuestros contratos, no habrı́a estado en
condiciones de salirse con la suya durante tanto tiempo.
En lo que respecta a la crisis legal, el factor decisivo fue que todos
tenı́amos menos de veintiú n añ os cuando irmamos nuestro contrato
original. Fue dudoso en toda la lı́nea. No sabı́amos ni una mierda lo que
está bamos acordando, o lo mal que estaba para nosotros no tener
nuestros propios abogados. ¿Có mo se suponı́a que ı́bamos a saber que
eso no era normal? Está bamos demasiado ocupados divirtié ndonos. Fue
una pena para Malcolm que todo terminara de la manera que lo hizo y se
fue de los Sex Pistols sin recompensa inanciera, pero no tenı́a a nadie a
quien culpar sino a sı́ mismo. Si simplemente se hubiera atribuido el
mé rito de las cosas que hizo en lugar de gastar todo nuestro dinero en
una pelı́cula que nos hizo pasar por un grupo de muppets que no sabı́an
tocar nuestros instrumentos, habrı́a estado bien.
En el intervalo entre la inalizació n de The Great Rock 'n' Roll Swindle
y su estreno, Cookie y yo seguı́amos trabajando en equipo, demostrando
que la pelı́cula estaba equivocada al trabajar tanto como pudimos y
tocar en algunos discos bastante buenos. en el proceso. El hecho de que
compartié ramos ese lugar en Bell Street realmente no habı́a funcionado
(increı́ble, de verdad, dado el placer que debe haber sido vivir conmigo),
ası́ que, aunque todavı́a habı́a algo de dinero en efectivo en el bote de los
Pistols, terminé con mi propia casa en Can ield Gardens, entre West
Hampstead y Swiss Cottage. Se podı́a ver lo poco iables que eran las
inanzas por la forma en que el dinero para eso apareció má gicamente,
casi como si saliera de una caja chica.
Fue un contrato de arrendamiento a corto plazo, tal vez cuarenta y
cinco añ os, razó n por la cual solo costó catorce de los grandes. Podrı́as
conseguir la puerta para eso ahora. No hubo un largo proceso de
pensamiento involucrado en la compra de mi parte, solo miré el lugar y
pensé : 'Sı́, esto es genial', pero puse mucho esfuerzo en hacerlo. Era un
poco ridı́culo porque realmente no sabı́a lo que estaba haciendo, pero
hice una ducha e incluso puse un pequeñ o escenario allı́: ¿el mundo del
espectá culo o qué ? Nadie má s en mi familia habı́a sido dueñ o de su
propio lugar antes, ası́ que supongo que desde afuera debe haber
parecido que yo era un gran triunfador, pero no se sentı́a ası́ en
absoluto... Quiero decir, me cogı́ a muchos pá jaros. en ese piso, no hay
problema. Tenı́a un pequeñ o cajó n en la mesita de café con el golpe, la
heroı́na, los tranquilizantes, los estimulantes, lo que sea, y los pá jaros se
apiñ aban alrededor de eso: trı́os, cuartetos... En retrospectiva, todo se
veı́a genial, y en un como era
Tenı́a un par de buenos autos de segunda mano en esa é poca, aunque
todavı́a no tenı́a licencia ni seguro. El primero fue un BMW 2002 negro
que le compré a un niñ o asiá tico con el que fui a la escuela y lo armé en
un motor realmente delicioso. Jimmy Macken y yo, que habı́a vuelto a la
escena un poco, aunque é l y Cookie no se llevaban muy bien, lo
conducı́amos por Londres muy rá pido a altas horas de la noche despué s
de ir a conciertos en el Music Machine. Estarı́amos jodidamente
borrachos y volando como locos, hasta el punto de que no puedo creer
que nunca hayamos tenido un accidente.
Má s tarde compré un gran Jaguar Vanden Plas de color cobre. Era un
coche genial, pero consumı́a mucha gasolina, lo cual era una gran
molestia porque cuando tuve ese coche, la crisis del combustible de
1979 estaba en pleno apogeo, ası́ que tenı́a que hacer cola durante horas
para conseguir gasolina y luego el tanque se llenaba. estar vacı́o de
nuevo un par de horas má s tarde. Sé lo que está s pensando: 'Te lo
mereces, bastardo, ¿por qué no estabas conduciendo un montó n de
mierda como el resto de nosotros?'
Cookie y yo é ramos una especie de armas de alquiler en ese
momento, y nuestro cré dito todavı́a era bueno en la industria, por lo que
está bamos trabajando con muchas personas que habı́an sido nuestros
hé roes. Cuando Johnny Thunders consiguió un contrato en solitario
despué s de que terminaron los Heartbreakers, toqué en algunas de las
pistas de su primer disco So Alone . Mirando hacia atrá s, una de las cosas
tristes de ese á lbum fue que hizo una versió n de 'Daddy Rollin' Stone' -
Otis Blackwell, creo que es de - con Cookie en la baterı́a, yo en la guitarra
y un cantante diferente en cada uno. de los tres versos. Phil Lynott hizo
un verso, Steve Marriott hizo un verso y Johnny Thunders hizo un verso.
Me alegro de no haber hecho uno, ya que todos estaban muertos en
1992.
Tambié n formamos equipo con Lynott unas cuantas veces como una
especie de supergrupo de punk/hard-rock llamado The Greedy
Bastards. Hicimos algunos conciertos mezclando canciones de los
Pistols y canciones de Thin Lizzy, e incluso tuvimos un é xito navideñ o
juntos en 1979. Nos reı́mos, y Phil me gustaba mucho, pero las cosas se
pusieron un poco feas entre nosotros hacia el inal una vez que
estuvimos ambos en heroı́na. Hay una guitarra Falcon blanca mı́a en su
museo en Irlanda que me estafó por una bolsa de droga, pero ganas algo,
pierdes algo. La gente que le ha robado abrigos a los Rolling Stones no
deberı́a vivir en casas de cristal, como creo que dice el viejo refrá n.
Me gustaba tocar con otras personas, y probablemente mi banda
favorita para tocar era The Clash. Me subı́ al escenario con ellos un par
de veces para hacer 'Janie Jones' o 'White Riot' o '... USA', esas fueron las
tres principales, y siempre lo disfruté mucho. Una vez (creo que fue
despué s de tocar Top of the Pops con Thin Lizzy el jueves por la noche)
manejé solo hasta Birmingham para hacer una canció n con ellos.
Para ser honesto, aunque nunca le mencioné esto a nadie en ese
momento, me hubiera gustado estar en The Clash entonces, parecı́a má s
divertido que lo que estaba haciendo. Fue antes de que sucediera The
Professionals y creo que me sentı́ un poco perdido. Supongo que fue
como imaginarme la familia perfecta cuando era niñ o. Nunca tuve un
sentimiento de rivalidad de esa banda; siempre fueron cá lidos conmigo
y yo siempre fui faná tico de ellos.
Sé que la hierba siempre es má s verde al otro lado del autobú s de la
gira, y estoy seguro de que The Clash tuvo que lidiar con su propia
confusió n interna, pero me relacioné con esos muchachos de una
manera que nunca pude con Lydon. Podrı́as reı́rte con Joe o Mick Jones
en el backstage y era como, 'Oh, está bien, ası́ que no todos son unos
completos idiotas como Rotten'. El problema con Johnny es que siempre
está 'encendido'. Y si ni siquiera puedes cerrar la puerta del camerino y
ser sincero con alguien con quien está s en una banda porque siempre
tiene que ser ese tipo, entonces, ¿cuá l es el punto?
The Clash no era la ú nica banda de gente de la escena que lo estaba
haciendo bastante grande en ese momento. No puedo negar que ver a
todo el mundo subié ndose al carro del punk me molestó un poco. A
pesar de que el espı́ritu estaba destinado a ser 'Cualquiera puede hacer
esto', cuando todos lo hicieron, solo pensaste: '¡Oh, vete a la mierda!' O al
menos lo hice. Sin embargo, no sentı́a lo mismo por la gente de Bromley,
porque habı́an estado allı́ desde el principio.
No habı́a prestado demasiada atenció n cuando Siouxsie tocó en su
primer concierto en el 100 Club con la baterı́a de Vicious, porque eran
una mierda. Pero aprecié la forma en que se veı́a, realmente lo hizo, y
obviamente tenı́a algo de talento porque los Banshees se convirtieron en
una banda decente al inal. No tanto despué s de que se volvieron gó ticos
en los añ os ochenta (eso tambié n se aplicó a The Damned: su primer LP,
antes de que cambiara la formació n, cuando Sensible todavı́a estaba en
el bajo en lugar de la guitarra, ese fue siempre el indicado para mı́), pero
ciertamente antes de eso. 'Hong Kong Garden' sigue siendo una canció n
genial, probablemente tengan una placa azul fuera de la comida china
para llevar que se trataba, y toqué algunas pistas en Kaleidoscope , su
á lbum donde la escritura gira en un cı́rculo en la contraportada. .
Siouxsie obtiene una pá gina prá cticamente para ella en el á lbum de
recortes sexuales de Steve Jones como una de las pocas que se escapó .
De initivamente tuve una oportunidad una noche, a menos que esté
soñ ando despierta, cuando los dos fuimos juntos al aeropuerto. Los dos
habı́amos estado en el West End haciendo speed y yo tuve la brillante
idea de conducir hasta Heathrow para ver despegar y aterrizar los
aviones (no creo que me hubiera creı́do si le hubiera ofrecido echar un
vistazo a mis grabados). Ası́ de suave era yo en esos dı́as; pasaron añ os
antes de que lo hicieran tambié n en Wayne's World .
Ahora que recuerdo, esto fue en otro automó vil diferente: un Lancia
que le compré a un tipo llamado Fachtna O'Kelly que dirigió The
Professionals durante un tiempo, por lo que debe haber sucedido un añ o
má s tarde. De cualquier manera, los dos fuimos al aeropuerto y
estacionamos. Desafortunadamente, cuando llegamos allı́, tenı́a tanta
velocidad que ni siquiera podı́a pensar en hacer un movimiento. Fue
divertido ver salir el sol, pero perder la oportunidad de contactar a
Siouxsie es uno de mis mayores arrepentimientos. Ahora, ¿quié n dice
que el verdadero romance está muerto?
Joan Jett se quedó a dormir en Can ield Gardens durante un par de
noches cuando tambié n hicimos la demo de 'I Love Rock 'n' Roll'. Esa
canció n terminarı́a siendo su mayor é xito; bueno, digo 'su' mayor é xito,
pero fue escrito por The Arrows. Era todo covers con Joan.
Esos eran los buenos tiempos, pero tambié n habı́a cosas horribles y
oscuras en ese perı́odo cuando vivı́a en Can ield Road y caı́a en la
heroı́na. Supongo que la banda que habı́a sido lo má s parecido a un
hogar que habı́a tenido ya no existı́a y me habı́a desorientado. No estoy
poniendo excusas por ir a esa tienda en Islington (regentada por un
viejo rockero de los sesenta, pero no mencionaré su nombre porque
todavı́a está vivo y podrı́a demandarme) que vendı́a insignias nazis y
compraba un par de viejas esvá sticas. banderas para colgar en las
paredes del saló n; Solo estoy tratando de explicar dó nde estaba mi
cabeza y por qué esta mierda oscura estaba tan sincronizada con có mo
me sentı́a.
Realmente no tenı́a en mente el concepto de los campos de
concentració n cuando los Sex Pistols estaban sucediendo, la historia es
una de las muchas materias en la escuela a las que no presté atenció n,
ası́ que para mı́ Vivienne's 'Destroy' T- las camisas con esvá sticas eran
casi impactantes. A inales de los añ os setenta esas imá genes nazis
brotaron de allı́ y cobraron vida propia. Hay una foto que surge de vez en
cuando de mı́ pasando el rato con Jimmy Pursey de Sham 69, cuando
está bamos pensando en hacer algo juntos despué s de los Pistols. Tengo
este Harrington puesto y debajo hay una camiseta que es solo esta gran
esvá stica descarada. Eso y nada má s, sin escribir ni nada.
Cada vez que veo eso, me da escalofrı́os. Fue raro, de verdad, porque
no soy racista y nunca lo he sido. Supongo que era solo una forma de
resumir la oscuridad que sentı́a. Habı́a hecho la fase progresiva y la fase
de gerente de Poco, por lo que la fase nazi era el siguiente paso ló gico.
Una cosa que no resultó ser el paso ló gico fue trabajar con Jimmy
Pursey. Cuando Cookie y yo le dimos una oportunidad a Jimmy, nunca
pensamos en los Sex Pistols, siempre lo consideramos como un grupo
nuevo. Lo extrañ o de todo era que nos gustaba, pero cuando nos
juntamos para tratar de escribir algunas canciones en un estudio en el
campo, no se le ocurrió nada. Su tapadera fue descubierta: no tenı́a el
talento o la inteligencia que tenı́a Rotten; ningun lugar cerca. Era como
si el mundo estuviera conspirando para hacernos extrañ ar a Johnny.
Recuerdo pasar el rato con Pursey una vez en la fase oscura. Fui con
é l y algunos de sus amigos a ver a The Undertones, los tipos irlandeses
que hacı́an 'Teenage Kicks', en un concierto en el territorio natal de
Jimmy en las afueras de Londres, el Guildford Civic Hall, creo que era.
Esto fue en mayo del '79. No tenı́amos nada en contra de The
Undertones, el plan era solo levantarnos y tocar con ellos, pero se volvió
loco sin ninguna buena razó n que pudiera entender y, de repente, estos
skinheads que eran el sé quito de Jimmy echaron a la banda. el escenario
y comenzó a destrozar sus cosas. Deberı́a haber tratado de detenerlo,
pero no lo hice. Fue muy extrañ o pero divertido en un sentido oscuro.
Sin embargo, no creo que fuera divertido para The Undertones, porque
tuvieron que correr y esconderse en el camerino.
Tuve una pequeñ a cosa con Sporty Spice añ os despué s, no
sexualmente, solo tocando en su disco en solitario. Me dijo que su tı́a era
la má nager de la gira de The Undertones en ese momento y le habı́a
dicho que todos estaban aterrados por lo pesado, violento y horrible que
era. ¡Y estas eran personas que crecieron en Irlanda del Norte en los
añ os setenta! Ciertamente habı́a una vibra extrañ a alrededor de Pursey.
No me sorprendió escuchar que terminó haciendo danza interpretativa
en la televisió n un tiempo despué s. Recuerdo que todos volvı́an a su casa
a la iesta y yo pensaba: '¿Dó nde está Jimmy?' y é l se estaba bañ ando…
Pensé que eso era raro. De hecho, incluso pensar en esta é poca me da
ansiedad por lo deprimente que fue. Me gustarı́a poder decir que he
llegado a mi punto má s bajo, pero no serı́a cierto. Lejos de ahi.

É
23. 'ME ORINÉ EN LA TUMBA DE ELVIS'
No pasó mucho tiempo despué s de que The Great Rock 'n' Roll Swindle
inalmente terminó que surgió otro proyecto de pelı́cula. Pasé
directamente de una versió n retorcida de dibujos animados de la
historia de la banda en la que realmente habı́a estado, a una pelı́cula
sobre una banda imaginaria que se convirtió en una real. Esto habrı́a
sido su iciente para follar incluso si no estuviera yendo de golpe a
Canadá en ese momento.
La segunda pelı́cula se tituló Ladies and Gentlemen, the Fabulous
Stains , y aunque habı́a un montó n de gente involucrada en ella que
habı́a sido (o llegarı́a a ser) realmente importante, era algo extrañ o y de
bajo presupuesto. Parecı́a que iba a ser una mierda en ese momento.
Realmente nunca tuvo un lanzamiento adecuado, y durante añ os nadie
habı́a oı́do hablar de é l, pero gradualmente se construyó un poco de
culto a su alrededor y si lo miras ahora puedes ver por qué , porque en
realidad es bastante divertido.
El director, Lou Adler, era un viejo hippie famoso que habı́a
producido la banda Spirit, y uno de los productores, Joe Roth, terminarı́a
al frente de Disney, aunque no creo que hubiera hablado de esta pelı́cula.
demasiado en esa entrevista de trabajo, ya que no era el tipo de cosa que
el tı́o Walt hubiera aprobado. La razó n por la que Cookie y yo nos
involucramos fue que Caroline Coon era la consultora musical. Su
trabajo consistı́a en darle a la pelı́cula un aire punk. Sin duda era una
experta en ese campo.
La historia principal era sobre esta banda de chicas adolescentes,
liderada por Diane Lane pero con Laura Dern tambié n, que se hizo
realmente grande bá sicamente siendo un poco como Lady Gaga. Querı́an
otras dos bandas como contraste: una era una especie de banda de rock
hippie desgastada dirigida por Fee Waybill de The Tubes, y la otra era
una banda de punk inglesa llamada The Looters, que era yo, Cookie, Paul
Simonon de The Clash y, en las voces, el actor Ray Winstone (que
acababa de hacer Scum y Quadrophenia ). Ray no tenı́a ni idea de lo que
estaba haciendo al principio, pero lo hizo bien al inal. Le mostramos
algunos movimientos y creo que se salió con la suya.
Está bamos ilmando en Vancouver, porque querı́an mucha lluvia. El
plan era hacer como si estuviera ambientado en Pensilvania o algú n tipo
de lugar industrial estadounidense, y tenı́amos que llegar allı́ unas tres o
cuatro semanas antes de la ilmació n para grabar parte de la mú sica.
Estaba tan nervioso cuando llegué que pensé : 'Oh, Canadá , es como
Estados Unidos: podré anotar, no hay problema'. Pero no pude oler ni un
poco. Habı́a estado bajo los efectos de la heroı́na y la metadona, ası́ que
estuve fuera de mi maldito á rbol sin dormir durante aproximadamente
un mes.
Tenı́an un par de bandas locales de punk en Vancouver; obviamente,
era una escena de poca monta, pero una de ellas, DOA, era bastante
buena. Una vez, cuando estaba pateando, Cookie y yo fuimos a un club
donde tocaba una banda u otra y allı́ estaban todos estos capullos de
pelo largo que vestı́an bengalas y chaquetas de raso. Hable acerca de que
Estados Unidos tiene un añ o de retraso. En Canadá fue má s como una
dé cada. Recuerdo estar sentado allı́ temblando por la abstinencia,
mirando a estos gilipollas con sus barbas y bigotes y solo queriendo
morirse.
Realmente no me gustaban los canadienses como pueblo. Me
parecieron un poco lentos. Si les pedı́as algo, les tomarı́a alrededor de
un minuto darse cuenta, pero supongo que probablemente fue porque
les suplicaba un poco de heroı́na y ninguno de ellos tenı́a. No puede
haber sido muy fá cil estar cerca de mı́ entonces, y Cookie probablemente
se llevó la peor parte. Pero ese viaje no fue un fracaso total. Las
canciones que escribimos y grabamos con Paul y Ray como The Looters
terminarı́an siendo la base de nuestra pró xima banda, The Professionals,
y una vez que pasé por lo peor de la patada, no lo llaman Jonesing por
nada. Incluso comencé a pasar un buen rato.
Habı́a mucha gente genial en ese elenco y equipo, y hubo una buena
cantidad de intercambio de habitaciones de hotel. Ademá s, el lugar en el
que nos alojá bamos era el Denman, que era lo má s cerca que Vancouver
estaba de un hotel de rock 'n' roll, por lo que todas las otras bandas que
pasaban de gira tambié n se quedaban allı́. Me acostumbré a subir a
Grouse Mountain, la gran estació n de esquı́ local, para tomar ponches
calientes a las diez de la mañ ana, y terminé convirtié ndome en una
especie de guı́a turı́stico para miembros visitantes de la aristocracia del
rock y el pop. Una vez llevé a Gary Numan a Grouse Mountain (ahora hay
una imagen perdurable) y tengo fotos divertidas en algú n lugar de
nosotros jugando en la nieve.
Fue divertido, y supongo que allanó el camino para lo que hago ahora
en Jonesy's Jukebox : siempre he tenido ese tipo de ambiente sociable
cuando se trata de otras personas en las bandas. Habı́a bastante tiempo
libre, e interpretar al guitarrista en una banda de punk inglesa no fue
demasiado complicado para mı́ en té rminos de actuació n; Lo habı́a
estado haciendo desde el show de Grundy de todos modos. La ú nica
verdadera ná usea era la madre de Diane Lane, a quien recuerdo como
una clá sica madre de pesadilla. Puede que haya sido la Playmate del mes
de Playboy en octubre de 1957, pero eso no impidió que fuera un dolor
de cabeza.
Cookie y yo habı́amos escrito algunas canciones decentes, 'Kick
Down the Doors' era una buena, y todavı́a tenı́amos demanda en ese
momento, por lo que Virgin estaba feliz de ichar a The Professionals,
pero para entonces yo no estaba en forma para hacer el la mayor parte
de la oportunidad. Decir que la heroı́na estaba nublando mi juicio serı́a
decirlo suavemente, y puedes darte cuenta de lo poco que estaba por el
hecho de que terminamos teniendo tres gerentes diferentes.
Primero fue Fachtna O'Kelly, este tipo irlandé s que solı́a dirigir a The
Boomtown Rats, luego estaba Dave Hill, que dirigı́a a los Pretenders.
Ambos eran buenos muchachos que hicieron todo lo posible por
nosotros, pero para entonces yo me estaba convirtiendo en una causa
perdida. Finalmente llegó un gran y amenazante promotor de la vieja
escuela llamado John Curd, que solı́a tener un barco junto al puente
Albert. Fue un error que no habrı́a ocurrido si no hubiera estado
drogado, pero cuando está s tan drogado como yo, pierdes la noció n de
cuá les son tus mejores intereses.
Incluso Curdy, que no era conocido como ilá ntropo, intentó
enderezarme. Me envió a las Islas Canarias con este otro tipo como mi
cuidador para alejarme de los tra icantes, y dejé de consumir drogas por
un tiempo mientras estuve allı́, pero todavı́a seguı́amos fumando y
enojá ndonos, lo cual fue un poco derrotado. el objeto. Era lo mismo
cuando The Professionals salı́an de gira. Esa fue la ú nica vez que dejé de
consumir heroı́na, pero luego estaba constantemente, beligerantemente
borracho, lo que no fue una gran mejora. Ese era mi concepto de estar
jodidamente sobrio en ese momento: dejar la droga. La heroı́na era el
á rea problemá tica. Hacer mamada, emborracharse, follar todo lo que se
movı́a y robar todo lo que no, todo estaba bien. Esta era la sobriedad de
nivel 1 de Steve Jones: aú n no habı́a captado el concepto de que para
estar sobrio, en realidad tenı́a que dejarlo todo.
Tenı́a mucho má s dañ o que atravesar antes de estar listo para hacer
eso: mi trabajo aú n no estaba terminado. El corto plazo de dos añ os y
medio desde que John se unió a la implosió n de los Pistols fue un
torbellino tal que cuando terminó nos quedamos tambaleá ndonos. Por
mucho que hubiera estado listo para decir, 'A la mierda, me largo de
aquı́', en San Francisco en enero del 78, fue como romper con una novia.
Aunque podrı́a ser tu elecció n no estar con alguien, todavı́a está s
devastado porque ya no está allı́. No procesé ese sentimiento de la mejor
manera: lo enfrenté como siempre enfrenté las cosas: encontrando una
manera de borrarlas.
Se podrı́a decir que The Professionals tuvo mala suerte, pero
supongo que nosotros, o al menos yo, creamos nuestra propia suerte.
Aparte de los problemas con el contrato y el disco que no era tan bueno
como las demos, lo peor que nos pasó no me afectó directamente. De
alguna manera, y no recuerdo exactamente có mo, pero probablemente
tenı́a má s que ver con el sexo o las drogas que con el rock 'n' roll, logré
no estar en la camioneta cuando el resto de la banda estaba en un auto
realmente serio. accidente en Minnesota en nuestra primera gira
americana en 1981. A algunos de ellos les tomó meses superar eso, pero
yo estaba demasiado borracho para darme cuenta.
Otra cosa que sucedió en los EE. UU. en la que té cnicamente no
estarı́a completamente presente (y negaré todo conocimiento si me
preguntan sobre esto bajo juramento) fue el incidente de retraso en la
tumba de Elvis unos meses despué s. Una vez mencioné esto en mi
programa de radio, pero me salté el tema, esperando que nadie
realmente estuviera escuchando. Incluso entonces pude escucharlos
entrar en pá nico en la sala de control, ya que no es algo de lo que haya
hablado demasiado en pú blico. Entonces, digamos hipoté ticamente que
tal incidente podrı́a haber ocurrido, sin comprometernos absolutamente
con el hecho de que ocurrió .
Si hubiera sucedido, probablemente habrı́a sido durante el dı́a, y el
perpetrador de initivamente habrı́a tomado una copa. El marco de
tiempo que estarı́amos considerando serı́a la etapa de Tennessee de la
gira estadounidense de The Professionals en 1982, y serı́a importante
enfatizar que el Graceland de esa é poca era muy diferente a como es
ahora. No se habı́a iniciado como una gran atracció n turı́stica, que es lo
que sucedió cuando la esposa o la hija de Elvis tomaron el lugar y lo
convirtieron en una má quina de hacer dinero. No podı́as entrar a la casa;
todo lo que podı́as hacer era ir y mirar la tumba. De hecho, el lugar
estaba tan desordenado en ese entonces que podrı́as pensar en la orina
que podrı́a o no haber tenido lugar como una protesta por las
instalaciones; tal vez fue incluso la orina lo que lo cambió todo.
Otro factor a tener en cuenta en defensa del pisser sexy (suponiendo
que é l o ella fuera sexy, que por supuesto lo eran... probablemente) es
que es bueno orinar cerca de una tumba porque mantiene alejados a los
coyotes. Entonces, tal vez este personaje fronterizo solo lo hizo, si es que
lo hizo, para proteger a Elvis de los coyotes. La razó n por la que estoy
siendo tan discreto sobre todo esto es, primero, porque realmente amo a
Elvis y, segundo, porque hay un poco de forma cuando se trata de estas
ofrendas lı́quidas de afecto y respeto de visitar a la realeza britá nica del
rock a sus estadounidenses. los an itriones son malinterpretados.
¿Recuerdas a Ozzy en el Alamo? Si esos tejanos enojados se hubieran
dado cuenta de que estaba tratando de proteger ese monumento
histó rico de los chihuahuas meá ndose en é l, probablemente lo habrı́an
tratado mucho mejor.
La relació n de The Professionals con el tipo que produjo nuestro
á lbum estaba a la altura de Ozzy y la gente del estado de Lone Star
cuando se trataba de empezar con el pie izquierdo (aunque creo que
Ozzy realmente falló ). Su nombre era Nigel Gray, y tuvo muchos é xitos
con otras personas: The Police, Pretenders, Siouxsie and the Banshees
incluso, pero no con nosotros. Tal vez la heroı́na le dio una buena razó n,
y tambié n hubo un incidente en el que robé algunas de las guitarras de
10cc de su estudio en el campo, lo que probablemente no ayudó , pero
simplemente no sentı́ que le agradá ramos.
Una noche, Nigel nos llevó a Cookie ya mı́ a casa desde su estudio. Iba
a dejarnos en la casa de Paul, pero justo cuando nos acercá bamos a
Hammersmith, un coche de policı́a nos detuvo y nos registró .
Encontraron un poco de droga en el auto que obviamente era mı́o, pero
al principio no querı́a reconocerlo. Cuando la policı́a dejó en claro que
iban a arrestar a alguien por eso, y Nigel fue bastante directo al decir
que no querı́a que ese alguien fuera é l, levanté la mano y me cortaron.
Entre ese momento y el caso que llegó a los tribunales, me fui a la
mierda a Estados Unidos y no regresé , ası́ que nunca me encontraron
culpable. Pero el cargo realmente fastidió mi visa, por lo que fue
cuestió n de tiempo si se me permitirı́a regresar a los EE. UU.
Joder sabe lo que hubiera pasado si hubiera tenido que quedarme en
el Reino Unido. De la forma en que me dirigı́a en ese momento, no creo
que estarı́a vivo ahora, y mucho menos escribiendo mi autobiografı́a
como la personalidad de radio punk rock 'n' roll má s querida de Los
Angeles. La parte divertida de esto fue que siempre estuve resentido con
Nigel por lo que pasó . Durante mucho tiempo, incluso albergé la loca
sospecha de que tal vez é l tuvo algo que ver con que nos detuvieran esa
noche, lo que habrı́a sido una verdadera mierda para é l. Tenı́a la
sensació n de que tenı́a alguna conexió n con la ley, como si hubiera sido
policı́a, o su padre, o algo ası́. Fue solo cuando estaba pensando en este
libro que me di cuenta de cuá l era esta conexió n con la aplicació n de la
ley. Nigel no habı́a sido informante de la Policı́a, pero los habı́a
producido.
Algunas personas podrı́an decir que esa es razó n su iciente para
sospechar de é l, pero Sting y los chicos tenı́an algunas buenas canciones.
Por supuesto, entonces no habı́a telé fonos mó viles, entonces, ¿có mo
podrı́a habernos engañ ado desde el motor en el que nos estaba llevando
a casa? Supongo que esto demuestra lo lejos que puede llegar alguien
que consume heroı́na para no enfrentarse a su propia parte en cualquier
cosa mala que le suceda.
Cuando salimos de Inglaterra para lo que resultó ser la ú ltima gira
estadounidense de The Professionals, tenı́a problemas má s grandes que
un cargo de posesió n de mierda sobre mı́. La ú nica pregunta en mi
cabeza en ese momento era: '¿De dó nde puedo obtener algo de droga?'
En busca de respuestas, siempre temporales, a esa pregunta, habı́a
vendido casi todo lo que poseı́a. Can ield Gardens habı́a quedado
prá cticamente despojado por mi incesante bú squeda de dinero de las
drogas, e incluso tuve que dejar mi guitarra y mi ampli icador a John
Curd para pagar una deuda que habı́a contraı́do. Nunca es una buena
señ al para un mú sico que tu manager te quite los instrumentos. Una de
las ú ltimas cosas que hice antes de irme a los EE. UU. en 1982 fue tocar
en 'Dancing With Myself' en Air Studios en Oxford Street con mi antiguo
compañ ero de Bromley Contingent, Billy Idol. El tambié n se dirigı́a a
Estados Unidos, pero en los añ os ochenta iba a ser mucho má s grande
que yo.
Si tuviera que intentar sumar mis razones para quedarme en
Inglaterra, no me costarı́a muchos dedos. En té rminos musicales, Cookie
y yo está bamos totalmente por encima de los requisitos para entonces.
Fui al club Blitz un par de veces, donde solı́an ir todos los chicos del
Nuevo Romá ntico a los que les gustaba disfrazarse, y sentı́ que el punk
era una noticia vieja. A nadie le importaba una mierda si está bamos allı́
o no. Las listas estaban llenas de mú sica de Kajagoogoo. Si aú n no lo han
hecho, todo fue Adam Ant, Big Country y The Human League.
Entiendo que el mundo cambia y la gente sigue adelante; Creo que lo
entendı́ incluso entonces. Pero ahora incluso mis viejos amigos se
estaban volviendo en mi contra. El mal presentimiento que Jimmy
Macken habı́a sentido (comprensiblemente) por no ser parte de los
Pistols habı́a comenzado a manifestarse de una manera que puso las
cosas feas entre nosotros. A veces parece que la otra cara de la moneda
de esa actitud de la clase trabajadora hacia el é xito es siempre el
resentimiento. Cookie habı́a estado haciendo todo lo posible para
mantener todo el asunto de Profesionales contra viento y marea, pero
incluso é l estaba harto de mı́. Y si hay una forma má s clara de demostrar
que tu carrera de rock 'n' roll es una carrera por el momento que
(posiblemente) mear en el lugar de descanso eterno del Rey, entonces yo
no sé cuá l es. Por la forma en que iba, las cosas podrı́an haber sido
mucho peores, al menos no me cagué en eso.

Á
24. EL HOGAR ES DONDE ESTÁ LA FOTO
DE 8X10 DEL CORAZÓN
Ya sabes lo que dicen, cuando las cosas se ponen difı́ciles, los duros se
van a la mierda para vivir con una dama de la noche. Enfrentado a los
diferentes tipos de carnicerı́a involucrada en la segunda y ú ltima gira
estadounidense de The Professionals, hice lo que siempre hacı́a cuando
una situació n se ponı́a tan mala que era necesario enfrentar la realidad:
huı́.
No habı́a una cosa especı́ ica que me obligara a quedarme en Estados
Unidos, pero habı́a un montó n de buenas razones para no querer volver
a Inglaterra. No querı́a volver a la oscuridad, los drogadictos, los
tra icantes, el cargo por posesió n y el piso vacı́o en Can ield Gardens sin
muebles porque lo habı́a vendido todo para comprar droga. Incluso las
banderas nazis habı́an desaparecido; ese lugar simplemente no se sentı́a
como en casa sin ellos.
A veces hay cosas que simplemente no puedes hacer, y la perspectiva
de golpear la banda en la cabeza solo para subir al avió n con los demá s y
volar a casa con la cola cuidadosamente metida entre las piernas parecı́a
una perspectiva tan sombrı́a. Ası́ que dije: 'Lo siento, nos vemos luego,
muchachos, no puedo volver a Londres', me fui con una mujer de mala
reputació n y no volvı́ a Inglaterra durante catorce añ os. Esa parte no fue
premeditada, pero el hecho de que uno de mis primeros actos despué s
de quedarme fuera vender mi pasaporte por algo de dinero (no
recuerdo a quié n, pero no obtuve mucho, tal vez $ 80) muestra cuá n listo
Debı́a dejar todo atrá s. Estaba en un patró n de pasar de la droga a la
opció n saludable de beber en exceso y cocaı́na cuando estaba de gira, y
luego volver directamente a la heroı́na en el momento en que
terminaban los conciertos. Si hubiera sido lo su icientemente
organizado como para tener prioridades, en realidad solo habrı́a habido
una en ese momento, y habrı́a sido 'Conseguir má s drogas'.
Cuando se trataba de heroı́na, siempre me habı́a considerado
superior a los rascadores que solı́as ver en King's Cross, que eran
bá sicamente zombis sin vida. Siempre se quejaban de có mo querı́an
estar limpios, pero no podı́as evitar pensar que eso no era realmente
cierto. Incluso cuando me comparaba con, por ejemplo, Johnny
Thunders & the Heartbreakers, que iban de ciudad en ciudad y lo
primero que hacı́an cuando llegaban era averiguar dó nde podı́an
conseguir, pensaba en ellos como verdaderos yonquis. y yo como de
alguna manera no uno real. Pero el agua azul clara que creı́ ver entre
nosotros se estaba llenando de jeringas viejas.
Tal vez esto fue solo la negació n que era parte de la adicció n, pero
todavı́a no me siento como si fuera un drogadicto en el fondo, como era
un ladró n. Es lo mismo con los alcohó licos, hay algunos que la vida los
ha empujado a beber demasiado por una u otra razó n, y otros que
sientes que nacieron para hacerlo. De initivamente caı́ en la segunda
categorı́a en lo que respecta al alcohol, pero sigo pensando en mı́ mismo
en la primera, en lo que respecta a la heroı́na. Para mı́, la droga era má s
un agujero en el que me caı́a cuando intentaba escapar, pero la
diferencia, si es que la habı́a, era otra cuestió n. El hecho es que estaba
haciendo cada vez má s cosas del tipo que hacı́an los adictos a la mierda,
y si se tambalea como un pato y se dispara como un pato, entonces es un
puto pato.
El jefe con el que hice un corredor tenı́a una cualidad que la cali icaba
para el trabajo: sabı́a có mo drogarse. Por só lida que fuera una base para
un romance duradero (bueno, funcionó para Sid y Nancy), no duró
mucho. Luego encontré otro pá jaro dispuesto a aguantarme que no era
una dama de la noche sino má s bien una mariposa social, a la moda de
todos los clubes. Terminamos quedá ndonos juntos por un tiempo. Era
un poco ingenua en lo que respecta a las drogas, pero despué s de unos
meses de quedarme con ella, encontró una aguja en mi bolsillo y se dio
cuenta de lo que estaba pasando. Pensé : 'Oh, eso es todo, el juego ya
terminó ', pero resultó que ella tambié n querı́a probarlo.
Nunca me he visto como un modelo a seguir, y la in luencia que tuve
en esta mujer no es algo de lo que me sienta orgulloso. Seguimos ası́
durante unos seis o nueve meses. Tenı́a un pequeñ o loft decente en
Nueva York, al estilo de East Village/Houston. Era un poco só rdido, no
todo estaba limpio como ahora. No recibı́as muchos turistas y era
peligroso caminar de noche, pero yo estaba demasiado desordenado
para preocuparme.
Al principio, todo el dinero provenı́a de ella, pero pronto me abrı́
paso con esa reserva, y una vez que estuvo delgada, volvimos a mı́ yendo
a clubes y robando bolsos o haciendo cualquier otra cosa
desmoralizante que pudiera para mantener el há bito. . El robo se habı́a
convertido má s en un placer ocasional cuando estaban pasando los Sex
Pistols, aunque solo fuera porque habı́a muchas otras cosas sucediendo.
Pero dicen que es bueno tener un intercambio al que recurrir, y el hecho
de que nunca me atraparon una vez que llegué a la Gran Manzana te
muestra que no me habı́a oxidado demasiado. Siempre fue de una
manera trivial: yo no era un gran ladró n de trenes. Eso sı́, Ronnie Biggs
tampoco era exactamente un cerebro criminal.
Las astucias callejeras de Londres eran muy diferentes a la variedad
de Nueva York en ese entonces. Verı́a a todos los otros drogadictos
arrastrando los pies con los ojos pegados a la acera sin darse cuenta de
que probablemente lo hacı́an por alguna razó n. Andar a zancadas por
Alphabet City (que era donde solı́a ir a la policı́a) como si fuera Can ield
Gardens puede no haber sido el movimiento má s inteligente en ese
momento. Ahora es un centro yuppie, pero en ese entonces era todo lo
contrario: un montó n de cuadras destartaladas controladas por
pandillas puertorriqueñ as, donde debı́ sobresalir como un pulgar
dolorido. Era un ambiente de jungla urbana aterrador, completamente
diferente a lo que estaba acostumbrado. Y no solo estaba fuera de mi
elemento, sino que la mayor parte del tiempo tambié n estaba fuera de
mi cabeza, ası́ que tuve suerte de que no me asaltaran.
Estuve cerca un par de veces. Joder sabe lo que me habrı́a pasado si
me hubiera despertado en un hospital con una conmoció n cerebral. No
tenı́a pasaporte, té cnicamente no tenı́a ningú n lugar donde vivir; estaba
adelantado a mi tiempo en lo que respecta a estar fuera de la red. Por
má s mierda que suene todo esto, estarı́a mintiendo si no admitiera que
tambié n habı́a un elemento de emoció n en ello. Alphabet City fue
de initivamente un juego de pelota completamente diferente a estar
sentado en la sala de un gringe mientras me hacı́a escuchar Tales From
Topographic jodidos océanos .
Hubo momentos en que caminar hasta allı́ para ser policı́a era lo
ú ltimo que querı́a hacer. Pero cuando está s enfermo por la droga, no
tienes otra opció n. Daba miedo, pero sabı́a que tenı́a que hacerlo. La
idea de drogarme era todo lo que me mantenı́a en marcha. No habı́a
alegrı́a viniendo de ninguna parte, pero al menos sabı́a cuá l era el punto
de mı́. Esto va a sonar jodidamente raro, pero ser un drogadicto se sintió
como una necesidad despué s de que terminaron los Pistols. Serı́a una
locura decir que me salvó la vida, pero ası́ es como me siento al respecto.
Nunca son los pobres los que se suicidan, siempre son los que tuvieron
algo y lo perdieron. Tengo suerte de que nunca he tenido sentimientos
suicidas coherentes en mi vida, y no puedes imaginar lo que se siente si
nunca has estado en ese lugar, pero el agujero dentro de mı́ estaba tan
abierto que joder sabe qué . de lo contrario, lo habrı́a llenado si no
hubiera tenido heroı́na.
No es que me gustara ser un drogadicto. Nunca quise hacer que ser
un desastre fuera parte de mi schtick como lo hizo Sid. Sabı́a lo paté tico
que me veı́a. Los está ndares estaban cayendo en té rminos de moda con
mis pantalones holgados y sué teres grandes y peludos; el pavo real de
mis dı́as de Sex Pistols habı́a perdido lentamente sus plumas y se habı́a
convertido en una maldita paloma. Yo era una puta alimañ a asquerosa, y
algunas de las cosas que harı́a para conseguir unos cuantos dó lares eran
tan mezquinas que me daban vergü enza. Robar los bolsos de los pá jaros
en los clubes ya era bastante malo, pero la novia a la que habı́a
corrompido habı́a vivido con un fotó grafo de rock antes de que nos
juntá ramos, y creo que el punto má s bajo de mi fase de adicto a Nueva
York fue cuando robamos un montó n de fotos de 8×10. de bandas a las
que habı́a fotogra iado, nada lujoso, solo fotos de prensa está ndar, y
trató de venderlas a los transeú ntes en la calle.
Sabes en qué broma te has convertido cuando tus posibilidades de
supervivencia dependen de azotar a alguien con una foto de prensa
robada de 8 × 10 de la banda Heart. Solı́a apretar los dientes y esperar
que nadie me reconociera.
Lo gracioso fue que, aunque no estaba en un buen lugar en té rminos
personales, todavı́a estaba feliz de estar en Estados Unidos en lugar de
Londres. Allı́ me habı́a sentido agotada y no deseada, y al menos Nueva
York era emocionante. Grandes calles, lugares que estaban abiertos las
24 horas… no era ası́ en Inglaterra. Todavı́a habı́a solo tres canales en la
televisió n y el sombrı́o ambiente londinense aú n no se habı́a despertado
y olı́a a los añ os ochenta. Ahora todo es má s o menos igual en todo el
mundo, es posible que la gente no recuerde lo diferente que era Estados
Unidos entonces.
Obviamente, Nueva York era má s atrevida que el resto del paı́s, y sé
que esto puede parecer extrañ o para alguien que era un yonqui en ese
momento, pero me encantó el hecho de que los estadounidenses todavı́a
se enorgullecı́an del servicio. Cuando ibas a un restaurante, incluso si
solo era un café barato, la gente hacı́a todo lo posible para hacerte feliz.
Pide un bocadillo en Inglaterra a esa hora y el cabró n se pone a llorar
porque no consigue que el trozo de jamó n sea lo bastante pequeñ o.
Despué s de haber estado en Estados Unidos un añ o má s o menos,
surgió otra banda. Fui yo, Tony Sales de la banda de Iggy Pop, Michael
Des Barres, quien habı́a sido el cantante principal de Silverhead a
principios de los añ os setenta; estaban un poco a la sombra de Led
Zeppelin pero con un toque glamoroso, y me gustó su segundo á lbum, 16
and Savaged , y Nigel Harrison y Clem Burke de Blondie. Esto fue en los
dı́as en que la industria de la mú sica tenı́a un poco de dinero para gastar,
y la gente te daba una gran cantidad de dinero solo por hacer un
espectá culo. Obviamente, el mı́o fue directo a mi brazo, pero hicimos el
concierto, que fue en el Peppermint Lounge, y todo salió bastante bien.
Comenzamos haciendo versiones. Creo que 'Vacation' de Go-Go's fue
la canció n con la que empezamos nuestro primer set, ası́ que te da una
idea del tipo de sonido que buscá bamos. Era solo una banda de rock 'n'
roll con un poco de punk debajo, pero no tenı́a mejores opciones en ese
momento, ası́ que cuando alguien dijo: 'Esto es bastante bueno,
deberı́amos hacer má s', estaba ' No voy a estar en desacuerdo.
El nombre de la banda, Checkered Past, resultó ser apropiado, dado
que el á lbum que hicimos un par de añ os despué s probablemente no sea
el que má s me recordará . Pero para ser honesto, la mú sica realmente me
importaba una mierda en ese entonces: estar en una banda con Sid
Vicious me habı́a sacado eso a golpes. Todo lo que querı́a hacer era
drogarme, y esta era una manera de hacerlo. Pero ciertamente no sentı́
que estaba traicionando el espı́ritu del punk al hacer un á lbum de rock
con un sonido má s tradicional. Incluso cuando estaba en los Pistols solı́a
volver al piso y jugar Boston y Journey. Hay un cierto sonido de rock
limpio, muy nı́tido, claro y meló dico que siempre me ha gustado mucho,
y cuando escucho una buena canció n, no puedo evitar que me guste: si el
cantante tiene una cresta o es un hombre. usar un vestido no me
importa.
Por supuesto, Malcolm no habrı́a estado feliz si hubiera admitido
cuá nto me gustaba 'More Than a Feeling' en entrevistas en 1976. Eso
habrı́a sido un no-no para una banda que estaba destinada a ser el
comienzo. de algo nuevo Pero no fuimos nosotros los que dimos con la
postura de que los Sex Pistols estaban en contra de toda la mú sica
antigua, por la sencilla razó n de que no está bamos en contra de toda la
mú sica antigua. Estuve de acuerdo con trazar una lı́nea debajo de
bandas como Emerson Lake y Palmer, capullos a los que nunca podrı́as
acercarte que habı́an desaparecido por sus propios culos con su
grandiosa riqueza. Entendı́ eso, nunca me gustaron, incluso en mi fase
progresiva. Pero cuando Checkered Past se formó en 1982, los rituales
del punk se habı́an vuelto tan inamovibles como lo fue el rock
progresivo.
No me preocupan todos esos tipos explotados. Nunca me importaron
una mierda ellos, ni GBH, ni ninguna de las bandas con grandes
mohicanos. Todos me parecı́an rascadores, e incluso si no lo fueran,
habı́an perdido por completo la trama de lo que era el punk. Las
primeras etapas fue la crema. Todos se vestı́an de manera diferente: no
se trataba solo de cuá n altas eran las puntas en el cabello y de tener una
chaqueta de cuero con tachuelas. Fue entonces cuando todo se volvió
tonto para mı́, cuando pasó de la emoció n de lo que podrı́as llegar a ser a
aferrarte a un uniforme, congelado en el tiempo. Una vez que dices,
'Quedé monos ası́ para siempre', no está s aportando nada nuevo ni
respondiendo a la vida a medida que sucede. En ese momento, bien
podrı́as ser un Teddy boy.
Ahora de initivamente necesitaba un nuevo comienzo, ası́ que
cuando la gente de Checkered Past dijo: 'Comencemos una banda, pero
tenemos que tener nuestra sede en Los Angeles', porque ahı́ era donde
vivı́a la mayorı́a de los muchachos, me llevó unos tres segundos para
decir 'sı́'. Conocı́ a Michael Des Barres en Dingwalls en Camden cuando
estaban los Sex Pistols y nos llevamos bien. Era una de esas personas
que vino a nuestro ú ltimo concierto en San Francisco en lugar de
simplemente decir que estaba allı́ cuando no lo estaba, como tantos
otros. Los imbé ciles todavı́a me hacen eso ahora: decir que estaban en
nuestros shows cuando no lo estaban. ¿Por qué lo hacen cuando solo los
atrapará n y se verá n como un imbé cil? Yo tambié n les haré eso.
'Oye, me encanta tu á lbum...'
'¿Oh, lo hiciste? Entonces, ¿cuá l es la pista tres de la primera cara de
Never Mind the Bollocks ?
No sé por qué cosas ası́ me molestan. Supongo que simplemente no
me gustan las tonterı́as, lo que hace gracioso que me haya mudado a Los
Angeles, má s o menos la capital mundial de las tonterı́as. Pero cuando
llegué por primera vez a California, ni siquiera el cliché de la actitud
estadounidense ante la vida "que tengas un buen dı́a" me molestó . De
hecho, descubrı́ que todos eran muy positivos despué s de la oscuridad
de Nueva York. Tambié n me gustaba estar libre de esa jodida vibra
inglesa en la que todo el mundo se molestaba tratando de apuñ alarte
por la espalda todo el tiempo.
Muchos britá nicos que se mudan a Los Angeles dicen que es
desorientador cuando llegas por primera vez, pero encontré el lugar
bastante fá cil de dominar. Todo está muy abierto y extendido, por lo que
generalmente puede ver a dó nde va: un camino es la playa, un camino
las colinas, un camino de regreso al aeropuerto y el otro camino hacia el
centro. El centro es má s como el antiguo distrito de la confecció n; ahı́ es
donde se congregan todos los vagabundos. O allı́ o en Santa Mó nica, lo
que tiene sentido para las viejas lá mparas de para ina cuando lo piensas.
Si tienes que quedarte sin hogar, hazlo en algú n lugar donde los
alquileres sean altos, siempre y cuando la policı́a no te moleste
demasiado. El centro de Los Angeles está bastante fuera de control en
estos dı́as: solo hay tiendas de campañ a, tiendas de campañ a, tiendas de
campañ a por todas partes y muchas de las personas en ellas son
drogadictos, por lo que es una escena muy extrañ a, de la que tuve la
suerte de nunca tener que ser parte. , aunque estuve cerca una o dos
veces.

Ó
25. DESINTOXICACIÓN EN TARZANA
La primera vez que fui a Los Angeles fue despué s de regresar a San
Francisco para producir The Avengers, esa banda que habı́a tocado con
los Sex Pistols en el Winterland. Pasé la mayor parte de ese tiempo
drogado porque la hierba era muy diferente a lo que estaba
acostumbrado en Londres, pero cuando me mudé a Los Angeles para
pasar el rato allı́ durante unos dı́as, mi cabeza era un Un poco má s claro,
y logré sacar a este pá jaro que vivı́a en una casa con piscina en Beverly
Glen. Pensé que era un palacio en ese momento, pero en realidad
probablemente era má s una choza.
Las noches eran muy cá lidas y ella tenı́a un gran descapotable, un
Cadillac de los añ os 60. Una noche fuimos a un autocine y mientras
conducı́amos por la autopista de San Bernardino fumando un porro
pensé : '¡Esto es el jodido paraı́so!' Se me quedó grabado en la mente que
algú n dı́a tendrı́a que venir a vivir allı́. Y una vez que estaba de regreso
en mi Nancy Spungen Love Palace en el lluvioso, gris y miserable viejo
Londres, solı́a ver el programa de televisió n CHiPs , sobre un par de
policı́as motorizados en la Patrulla de Caminos de California (de ahı́ el
tı́tulo: inteligente, eh ?), y piensa en lo mucho que preferirı́a estar en Los
Angeles: grandes jodidas autopistas, grandes vallas publicitarias,
grandes tetas: estaba vendido.
En el momento en que inalmente llegué allı́, que probablemente fue
a principios de 1983 (no me pidan que sea má s especı́ ico, es un milagro
que pueda recordar en qué dé cada era), no tenı́a una olla para mear. en.
Estaba durmiendo en los sofá s de la gente, pero al menos estaba en un
lugar diferente y estaba soleado todo el tiempo. Luego, cuando llegó algo
de dinero despué s de que EMI irmara Checkered Past (tambié n
querı́amos el cheque), las cosas mejoraron un poco.
Decidı́ en ese momento intentar no volver a drogarme. A riesgo de
sonar como un viejo hippie, siento que hubo algú n tipo de intervenció n
divina involucrada en mi decisió n. Pero habı́a un largo camino por
recorrer antes de que pudiera poner completamente en prá ctica esa
buena intenció n. Todavı́a no habı́a caı́do la moneda de que realmente
deberı́a estar sobrio: la maquinaria se estaba moviendo, pero el sistema
no estaba completamente operativo.
El tipo que puso las cosas en marcha para mı́ sabı́a bastante sobre
có mo funcionaba ese mecanismo. Era Danny Sugerman, quien habı́a
manejado lo que quedaba de The Doors despué s de la muerte de Jim
Morrison. (Má s tarde escribió el libro que se convirtió en la pelı́cula de
Oliver Stone y otro sobre su vida como adicto a la heroı́na). Uno de los
chicos de Checkered Past conocı́a a Danny, quien a su vez conocı́a a un
Dr. Feelgood en este edi icio en Century City. quien me puso en una cosa
privada de metadona que me sacó del ajetreo y me salvó de tener que
robar a la gente. Mientras intentaba eso, terminé viviendo en el Valle
durante unos meses con Nigel Harrison, que solı́a estar en Blondie. Nigel
es un tipo bastante reservado, muy orientado a los negocios, pero
tambié n con un divertido sentido del humor.
Ese fue un perı́odo extrañ o, a mediados de la dé cada de 1980, cuando
a nadie parecı́a importarle un carajo el punk. Ahora ha vuelto a ser un
gran problema y parece que nunca desaparecerá , pero luego parecı́a
algo que habı́a sucedido pero que ya habı́a terminado.
Nunca lo pensé dos veces en ese momento: habı́a estado en una
banda, habı́a terminado rá pidamente y pronto todo serı́a olvidado. Eso
pareció tener sentido para mı́. Incluso cuando estaba haciendo mi
primer disco en solitario con el pelo largo, que fue en 1986-1987,
todavı́a a nadie le importaba una mierda. Fue solo a partir de inales de
los ochenta, cuando Megadeth, Mö tley Crü e y Guns N' Roses hicieron sus
versiones de las canciones de los Pistols, que todo comenzó a volver a
enfocarse. Mirando hacia atrá s, creo que ese perı́odo de tiempo fuera del
centro de atenció n probablemente me hizo un favor, ya que signi icó que
tuve que reinventarme un poco en lugar de vivir de glorias pasadas.
Una vez que tuve su iciente de vivir con Nigel en el Valle, me mudé a
un par de casas diferentes con Michael Des Barres, su esposa Pamela y
su hijo Nick. Vivı́ con ellos durante un par de añ os al inal. Les pagaba el
alquiler y no consumı́a tanta droga, pero lo compensaba bebiendo
mucho, chupando y follando muchos pá jaros. ¿Quié n no me querrı́a
como hué sped?
Uno de sus lugares estaba cerca de un gran lugar de reunió n punk en
Santa Monica Boulevard. Era divertido: solı́a caminar por allı́ de noche
mientras todos andaban afuera con sus mohicanos y nadie sabı́a quié n
era yo. Me escabullirı́a desapercibido. Que fue lo que tuve que hacer
desde la casa de Des Barres despué s de volver a la droga y robar los
á lbumes de los Beatles de Pamela y su chaqueta de cuero para pagar
algunos. Todavı́a me siento mal por eso ahora. Hice las paces con ella y
Michael añ os despué s y creo que me perdonaron, pero les tomó un
tiempo; no querı́an tener nada que ver conmigo durante añ os, y no
puedo culparlos.
No eran solo otras personas a las que estaba jodiendo en ese
momento. Yo tampoco me estaba haciendo ningú n favor. Como la vez
que tuve una sobredosis en el restaurante de sushi en la esquina de los
bulevares La Cié nega y Santa Mó nica. Me reunı́a con el hombre en un
restaurante de sushi y llegaba tarde (como dice Lou Reed, siempre lo
hacen), ası́ que estaba bebiendo sake. Cuando inalmente aparece, estoy
borracho. Entro al bañ o para inyectarme y enseguida me quedo
inconsciente. Lo siguiente que sé es que estoy siendo in lado con algo de
esa mierda de adrenalina y los paramé dicos me está n dando descargas
elé ctricas para traerme de vuelta.
Me senté en el asiento del khazi para inyectarme y cuando la heroı́na
llegó a mi torrente sanguı́neo, me deslicé y mi pie pasó por debajo de la
puerta. Por suerte para mı́, un tipo vino a usar el bañ o y lo vio. Si no
hubiera sido por mis grandes platos de carne, no estarı́a aquı́ ahora.
Imagı́nense los titulares de 'Sex Pistol Dead On Sushi Toilet': habrı́a sido
como un Elvis de la Costa Oeste. Esa fue la ú nica vez que recuerdo
completamente una sobredosis, y creo que es algo que incluso yo
recordarı́a, pero hubo algunos escenarios que se acercaron. No mucho,
pero algunos. La peor parte del sushi era que no podı́a esperar para
cargarme de nuevo en el momento en que salı́ del hospital.
'I'm Waiting for the Man' es una de las mejores canciones jamá s
escritas sobre lo que se siente. Siempre me encantó The Velvet
Underground, y hay algunos discos en solitario de Lou que tambié n me
gustan mucho: Berlin , Coney Island Baby , Rock n Roll Animal , ninguno
de ellos tiene nada de malo. Es un compositor fantá stico, pero fue
horrible en vivo, especialmente en los ú ltimos añ os. Es extrañ o lo
pegadizas que son esas melodı́as, porque apenas podı́a llevar una nota.
Creo que tal vez es uno de esos tipos que era tan bueno como cualquiera
que tuviera a su alrededor. La razó n por la que Transformer resultó tan
bien fue porque Bowie y Mick Ronson estaban muy involucrados. Si Lou
lo hubiera hecho todo é l mismo, probablemente habrı́a sido un montó n
de mierda.
De todos modos, Lou habrı́a sabido incluso mejor que yo que no
puedes hacer que alguien esté sobrio hasta que esté bien y jodidamente
preparado. Cuando hice mi primer intento vagamente serio, en 1985,
tenı́a un horrible problema con las drogas. Alguien tuvo la amabilidad de
llevarme a un centro de rehabilitació n en Tarzana. Bueno, no era tanto
un centro de rehabilitació n como un lugar de desintoxicació n. Eran
cincuenta dó lares por dos semanas y lo que te ofrecı́an por ese dinero
era una habitació n grande con un montó n de camas elá sticas donde te
desintoxicaban con metadona.
Eramos yo y un grupo de pandilleros, bá sicamente. Está bamos
bastante cerca del inal de la cadena alimenticia en té rminos de
rehabilitació n, pero no querı́a quedarme sin nada, y esto era lo mejor
con lo que podı́a conectarme en esa etapa. En realidad, estuvo bien en
un sentido sencillo. Está s mucho mejor en un lugar donde todos saben
por qué está n allı́ que en un lugar elegante donde todo está preparado
para desplumarte por la mayor cantidad de dinero posible. Estaba en mi
parte superior, por lo que era má s una situació n de mendigos que no
pueden elegir. Estaba má s o menos sin hogar en ese momento porque
habı́a cabreado a todos los que conocı́a robá ndoles.
El buen samaritano que no pasó por el otro lado era una mujer
llamada Linda con la que solı́a drogarme. Volá bamos juntos y
conducı́amos por Los Angeles haciendo locuras, pero en ese momento
ella estaba recié n sobria y me la encontré saliendo de una reunió n de 12
pasos en el lugar donde solı́a estar el Guitar Center. Estaba en un estado
bastante desesperado en ese momento, solo caminaba buscando algo
para robar. Linda vio que estaba mal y dijo que podrı́a tener un lugar
para dormir en su sofá si iba al programa de 12 pasos.
Esta fue mi primera introducció n a algo que me llevarı́a cinco o seis
añ os entender por completo (y veinticinco añ os má s tarde, todavı́a
tengo un camino por recorrer). Empecé a meterme en ir a reuniones e
incluso levanté la mano para hablar en una pareja. En uno terminé
admitiendo que necesitaba un lugar para vivir y este tipo accedió a
alojarme en su casa. Obviamente, tenı́a sus propios motivos: era un tipo
bastante nerd y tal vez pensó que tener un Sex Pistol en su futó n lo harı́a
lucir genial. Cada hogar debe tener uno; Deberı́a haberme dejado
quedarme allı́ gratis.
Sin embargo, funcionó bien para mı́ y le estaba agradecido. Tenı́a un
poco de humildad para entonces y me sentı́ aliviado de no tener que
estar haciendo nada de lo que habı́a estado haciendo para drogarme. No
me importaba patear en el sofá de este viejo. Era un lugar seguro para
mı́ y terminé quedá ndome allı́ durante aproximadamente un añ o.
Su departamento estaba en Hollywood, alrededor de 3rd Street y
Gardner, y allı́ habı́a un parque al que solı́a correr. Fue bueno para mı́
pasar desapercibido por un tiempo, porque mi cré dito no era bueno en
la industria de la mú sica. . No era solo que no hubiera mucho trabajo: la
gente cruzaba la calle activamente para evitarme (no los culpé ,
probablemente habrı́a hecho lo mismo si hubiera podido). Tenı́a que
encontrar alguna otra forma de traer un poco de dinero que no
implicara tener problemas con la ley.
Ası́ que comencé a dar plasma por cincuenta dó lares cada uno. Iba a
un par de reuniones al dı́a, me tiraba a las chicas que conocı́ allı́ y me
subı́a al autobú s al Valle para darles mi mejor clarete. Probablemente
habı́a todo tipo de mierda dando vueltas en mi torrente sanguı́neo en
ese momento, pero ni siquiera sé si lo analizaron para ver si estaba
contaminado. Ciertamente no usaban agujas nuevas, solo las lavaban,
pero me importaba un carajo. Eran cincuenta dó lares (en forma de
cheque que podı́a darle al tipo del sofá en alquiler) y no iba a robar má s,
que era todo lo que me importaba. Bien, entonces no me detuve por
completo, todavı́a hurgué un poco mientras estaba sobrio. Era una
forma tan natural para mı́ de obtener cosas que me tomó mucho tiempo
parar por completo.
Me tomó incluso má s tiempo comenzar a juntar los dos
rompecabezas para poder entender la forma en que se superponı́an las
diferentes adicciones. Tendrı́a que hacer un montó n de añ os de terapia
como parte de ese proceso, y hubo muchos momentos en los que quise
escapar, pero inalmente aprendı́ a no hacerlo. Sin embargo, cuando iba
a esas primeras reuniones, estaba realmente dañ ado. No tenı́a ni idea de
có mo ser una persona decente. Todo se trataba de mı́, y no me
importaba a quié n má s herı́a. Ası́ que estos fueron solo los primeros
pasos de un largo camino, un camino sin in.
En ese momento no tenı́a idea de có mo comportarme como una
persona normal, o có mo reaccionar ante las emociones, ese era mi
principal problema. No era como si yo fuera un completo capullo con la
gente, pero si alguien lastimaba mis sentimientos, no lo tratarı́a como lo
harı́a una persona normal. Tendrı́a que portarme mal o salir corriendo,
solo encontrar alguna manera de no lidiar con eso. Habı́a estado usando
esa capa de invisibilidad durante tanto tiempo que era como una
segunda piel.
Sacar la droga de mi sistema fue solo el comienzo. Cuando está s en
las primeras etapas de la sobriedad, tiendes a descontrolarte
emocionalmente, porque comienzas a experimentar muchos
sentimientos que has bloqueado durante mucho tiempo. Por supuesto,
todo lo que querı́a hacer era follar con chicas, que era bá sicamente otra
forma de dejar fuera la realidad. Pero un gran punto de in lexió n para mı́
llegó cuando alguien me jugó en mi propio juego y, por primera vez en
mucho tiempo, estaba lo su icientemente sobrio como para que algo me
importara.
La chica de la alta sociedad con la que habı́a vivido durante un
tiempo en Nueva York (no el jefe, la otra) vino a Los Angeles despué s de
que pasara lo del Pasado a cuadros. Su nombre era (y es) Nina Huang, y
todavı́a somos buenas amigas. Ella tambié n se puso sobria en ese
momento, y por un tiempo casi estuvimos viviendo juntos. Por supuesto
que todavı́a me estaba tirando a otras chicas a diestra y siniestra, pero
un dı́a hablé con su patrocinador de 12 pasos quien, por alguna razó n,
pensó que era una buena idea decirme que Nina habı́a jodido. Bueno,
será mejor que no lo haga. imprima el nombre porque causarı́a
demasiados problemas incluso ahora. Digamos simplemente 'una de las
principales estrellas de cine de Hollywood de la lista A'. Por mucho que
no tenı́a derecho a ofenderme, dada la cantidad de mierda que habı́a
estado haciendo, esto me devastó .
Era la primera vez que alguien realmente cambiaba las cosas en mı́,
ası́ que no era yo quien molestaba. Esto puede ser difı́cil de creer, pero
nunca antes habı́a pensado en todo el dolor que estaba causando a la
gente. Por supuesto que no era la primera vez que me jodı́an, pero en los
viejos tiempos habrı́a ahogado todo lo que sentı́a en alcohol, drogas o
robos. Esta vez, debido a que estaba sobrio recientemente, no tuve má s
remedio que experimentarlo. Recuerdo haber pensado, 'Oh, fó llame,
esto se siente como una mierda. ' Fue una lecció n dolorosa, pero tambié n
fue una gran lecció n, ya que fue la puerta de entrada para que
comenzara a cambiar las cosas en la forma en que trataba a otras
personas.
Tenı́a que encontrar una manera de superarlo, pero tambié n tenı́a
que mantenerme sobrio en el proceso. Tuve que dejar de pensar en no
sentir emociones; Literalmente no comı́ ni dormı́ durante dos semanas.
Esa mierda fue peor que la metadona. Pero cuando salı́ por el otro lado,
me habı́a puesto en la vı́a rá pida hacia la recuperació n. Bueno, cuando
digo la vı́a rá pida, tratar de encontrar una manera de tratar a otras
personas un poco mejor no iba a ser un proceso de la noche a la mañ ana.
Pero al menos mis ojos estaban abiertos ahora al tipo de mierda que
tenı́a que dejar de hacer. Las viejas costumbres habı́an muerto con
fuerza, pero mis dı́as de follar con las chicas de mis compañ eros y no
preocuparme estaban en camino a ser cosa del pasado.
Casi como una recompensa por dar mis primeros pasos tentativos en
una mejor direcció n, las cosas tambié n empezaron a mejorar en el frente
laboral. Incluso en mis dı́as má s oscuros, nunca perdı́ mi con ianza como
mú sico: la gente siempre parecı́a impresionada por lo que hacı́a y eso
era su iciente para mı́. Como persona, era un asunto diferente.
De initivamente no me sentı́a adecuada, pero, de nuevo, nunca lo habı́a
hecho.
Uno de los primeros trabajos pagados que se realizó fue trabajar con
Andy Taylor de Duran Duran en su disco en solitario. Habı́a mucho
dinero en la industria discográ ica a mediados de los ochenta, y Andy
estaba de moda entonces, ası́ que le pagaron millones por hacer ese
disco. Tal vez no tantos de esos millones llegaron a su coguionista como
me hubiera gustado, pero agradecı́ que me diera una oportunidad
cuando nadie má s lo harı́a, ası́ que difı́cilmente iba a dejar el trato fuera
de la cama.
Unos meses antes, yo era un drogadicto que no podı́a ordenar mi
mierda. Ahora estaba construyé ndome lentamente una nueva vida: estar
sobrio bajo el sol, follando con algunas mujeres hermosas. Incluso tuve
que moverme del sofá de ese viejo. Andy Taylor tenı́a algunas casas en
Los Angeles, y una de ellas estaba justo al lado de Sunset Boulevard,
cerca del hotel Hyatt, en King's Road, curiosamente. El estaba viviendo
en Malibu y solo venı́a a la ciudad una vez cada luna azul, ası́ que estaba
de acuerdo con que yo me mudara.
Rá pidamente se corrió la voz de que estaba haciendo un buen trabajo
para é l, y no pasó mucho tiempo antes de que me ofrecieran un contrato
en solitario. Fue con un tipo llamado Danny Goldberg que habı́a
trabajado con Led Zep en los añ os setenta y luego serı́a gerente de
Nirvana. Me irmó con MCA para hacer Mercy , un á lbum de canciones de
rock suave que no se parecı́a en nada a nada que hubiera hecho antes.
Supongo que era mi oportunidad de hacer una banda sonora para la
apariencia de gerente de Poco que solı́a usar de un lado a otro de King's
Road, y aunque no es lo que má s me pregunta la gente que he hecho,
todavı́a estaba orgulloso. hacer un disco mientras estaba sobrio, y
hacerlo fue muy signi icativo para mı́.
Me compré una camioneta GMC con el primer poco de dinero que
llegó . Era el primer motor que compré correctamente desde que estuve
en Estados Unidos, y ahora tengo uno similar. Las cosas estaban
mejorando.
26. IGGY, DYLAN Y EL GRAN O
La idea de estar en el escenario completamente sobrio fue aterrador al
principio. Recuerdo que pensé : 'Nunca podré hacer un concierto sin al
menos una pinta dentro de mı́'. Ası́ que comencé varias bandas de dos
bobs con otras personas que estaban sobrias, solo para intentarlo. El
primero se llamaba Dano and Jones: como sugiere el nombre, é ramos
solo yo y este tipo, Rick Dano. Cuando tenı́a unos sesenta dı́as sobrio,
reunimos a esta pequeñ a banda para tocar en un lugar que en ese
momento se llamaba Central, pero luego se convirtió en Viper Room.
Era simplemente rock 'n' roll tradicional, pero a la gente le encantó , y
la adulació n de todos besá ndome el trasero cuando terminó , y teniendo
sexo despué s, fue muy ú til. A partir de entonces, se hizo cada vez má s
fá cil. La idea de que juegas mejor cuando está s drogado siempre fue un
montó n de tonterı́as: tal vez te suene mejor a ti mismo, pero eso es
porque está s drogado y no se puede con iar en tu juicio. Si realmente
quieres saber có mo suenas, trata de escucharte a ti mismo cuando esté s
sobrio.
Ahora que lo pienso, la primera persona que me ayudó a volver a
escribir y grabar de nuevo estando sobrio no fue Andy Taylor. Iggy Pop
fue un mentor mucho má s apropiado. Cuando se trataba de arreglar tu
mierda y volver a ponerte de pie, é l habı́a estado allı́ y lo habı́a hecho.
The Stooges habı́a sido un gran problema para mı́ cuando estaba
haciendo mi curso intensivo de guitarra de pastillas para adelgazar en
Dinamarca Street en 1975, y estaba realmente enojado por perderme el
famoso concierto que Iggy hizo en Scala en King's Cross con los Flamin'
Groovies unos añ os antes, ası́ que no iba a perder la oportunidad de
tocar con é l diez añ os despué s.
Conocı́ a Iggy cuando todavı́a estaba en The Professionals. No
recuerdo có mo surgió , pero pasamos el rato en Nueva York un par de
veces. Luego, má s tarde, vino a Los Angeles por un tiempo y escribimos
juntos durante aproximadamente un mes. De esos demos con los que
terminé , creo que cuatro coescribieron lo que se convirtió en su á lbum
Blah Blah Blah . Iggy estuvo genial tal y como te lo imaginas: se le
ocurrieron letras realmente buenas y fue divertido estar con é l.
Recuerdo haber pensado: '¿Por qué escribir con Rotten no pudo haber
sido ası́?'
De acuerdo, Matlock ya me habı́a ganado la mano al tocar con Iggy
Pop (en Soldier ), pero no habı́a forma de que pudiera competir con el
look de Sammy Hagar en el que estaba trabajando cuando Iggy y yo
tocamos 'Cold Metal' de su pró ximo á lbum, Instinct , en Letterman en
1988. Lo gracioso de eso es que muchas de las personas que comentan
en YouTube no creen que sea yo, porque no pueden manejar mi gran
cabello.
En realidad, no deberı́a haberme hecho tan conspicuo como lo hice
en mi fase de Fabio, porque como extraterrestres, yo era totalmente
ilegal. Ni siquiera deberı́a haber estado en Estados Unidos, y no tuve una
tarjeta verde durante unos diez añ os. Es por eso que no pude ir a Suiza
para tocar en la grabació n real de Blah Blah Blah ; si lo hubiera hecho, no
habrı́a podido regresar. No eran só lo las viejas convicciones inglesas las
que me obstaculizaban; Cookie y yo nos emborrachamos en King's Head
en Los Angeles un dı́a y me mataron por rasgar un sué ter. Fue solo un
delito menor, pero no ayudó cuando estaba tratando de legalizarme.
Supongo que tuve suerte de no ser deportado. Ademá s de arruinar mi
vida, que me echaran del paı́s por delitos contra las prendas de punto
habrı́a sido vergonzoso.
The Cloak of Invisibility me ayudó a pasar algunos añ os ilegales má s
en Los Angeles. Acabé teniendo que volver a Londres a principios de los
noventa para conseguir un visado de trabajo, y en ese momento me las
arreglé para entrar en ese sistema en el que tienes que volver a
Inglaterra todos los añ os para renovarlo. Fue un maldito dolor en el culo,
especialmente porque Inglaterra era el ú ltimo lugar en el que querı́a
estar en ese momento, pero seguı́ y inalmente la tarjeta verde fue mı́a.
Para mı́, una gran parte del proceso de volverme sobrio fue ponerme en
la red, ası́ que dejé una huella en el mundo como un maldito ser humano
normal, en lugar de ir a la deriva de una acció n vergonzosa a la
siguiente. La capa tenı́a que irse, supongo que eso fue lo que sucedió .
El primer paso fue conseguir una direcció n regular propia. Estuve en
las llanuras durante mis primeros añ os en Los Angeles, pero tan pronto
como gané lo su iciente para cubrir el alquiler, me mudé a los cañ ones.
Fue un gran salto para mı́: subir a las colinas. Encontré la atmó sfera de
los á rboles y la tranquilidad un poco extrañ a al principio. Aparte de todo
lo demá s, era lo má s alejado del paı́s en el que habı́a vivido desde que
estaba en Banstead Hall. Y no solo ocurrieron los asesinatos de Manson
a la vuelta de la esquina, siempre existı́a el peligro de despertar y
encontrar a Joni Mitchell tocando su guitarra acú stica al pie de la cama,
lo que probablemente me hubiera parecido má s aterrador que lo de
Manson, para ser honesto.
Alquilé dos lugares diferentes durante unos cuatro añ os cada uno
antes de reunir la masa para comprar en algú n lugar. Mientras tanto, no
era só lo un pasaporte, un permiso de conducir y una tarjeta de cré dito lo
que tenı́a que resolver, estaba el pequeñ o asunto de aprender a leer y
escribir correctamente. Ahora tenı́a treinta y tantos añ os , y saber que
aú n no sabı́a leer y escribir era una fuente constante de inseguridad y
vergü enza para mı́. Antes de estar sobrio habı́a tenido tantas otras cosas
de las que avergonzarme que esta se habı́a quedado en un segundo
plano, pero ahora era el momento. Ası́ que contraté a este pá jaro asiá tico
para que me enseñ ara. Ella me ayudó mucho: vino a visitarme durante
una hora dos veces por semana durante unos seis meses, y una vez que
me involucré , encontré que el aprendizaje era mucho má s fá cil de lo que
esperaba. Era una buena maestra, lo que ayudó , y tambié n una gran
chica. Creo que querı́a una porció n al inal, pero no me molesté porque
era demasiado dulce.
Me hizo sentir mucho mejor poder hacer algunas de las cosas que
hace la gente normal, pero hay lı́mites. Hasta el dı́a de hoy, todo lo que
hay que tratar pasa por mi o icina de administració n, y si aparece algo
en casa que tengo que irmar, entro en pá nico. Todavı́a no puedo lidiar
con las facturas y cosas ası́. Simplemente me asusta la mierda. No es solo
que no quiera lidiar con eso, ni siquiera quiero verlo. Por eso no creo
que jamá s hubiera podido tener un trabajo normal. No es que crea que
estoy por encima de esas cosas, simplemente no puedo molestarme.
Incluso mientras intentaba aferrarme a la disciplina de la sobriedad,
la libertad de esos primeros añ os en Los Angeles fue grandiosa. Estaba a
un mundo de distancia de estar en un só rdido só tano de Londres
arrancá ndote los puntos negros; en Los Angeles podrı́as hacer que
alguien má s los recogiera por ti. Y me encantó el hecho de que podı́as
andar en moto sin tener que usar casco. Ası́ fue como Mickey Rourke y
yo terminamos reviviendo todo el asunto de Harley-Davidson. No hay
ningú n ego involucrado en que yo diga eso, es solo la verdad. Cuando
empezamos a montarlos, nadie má s lo hacı́a excepto los verdaderos
engrasadores.
Desde conducir por Londres para buscar muestras de la ropa rockera
de Malcolm y Vivienne en los dı́as de Demasiado rá pido para vivir,
Demasiado joven para morir, hasta ayudar a recuperar la Harley en Los
Angeles, donde todo comenzó , es un buen tipo de cı́rculo. Ver a Mickey
Rourke por primera vez fue divertido. Yo tenı́a una Harley y é l tambié n,
pero no nos conocı́amos. Me encontré con é l en un café una noche. El no
era muy popular en ese momento y yo tampoco. Nos miramos el uno al
otro y nos comprobamos el uno al otro, de la misma manera que dos
skinheads sin camisa Brutus podrı́an haberlo hecho en Shepherd's Bush
Market veinte añ os antes. , y no pasó mucho tiempo antes de que
empezá ramos a juntarnos como parte de un pequeñ o equipo.
Mickey Rourke puede parecer una persona divertida con la que
empezar a salir cuando está s sobrio, ya que en realidad no es un tipo de
12 pasos, pero aunque sabı́a que le gustaba la iesta, nunca lo vi jodido
alrededor de las bicicletas. . Mickey habı́a construido esta cafeterı́a en el
corazó n de Beverly Hills llamada Nicky and Joey's. Algunos de nosotros
solı́amos pasar el rato allı́ y se convirtió en algo importante má s o menos
de la noche a la mañ ana; de repente, é ramos cincuenta. No é ramos
moteros de verdad, solo farsantes los ines de semana.
Lo má s importante era encontrarnos en la cafeterı́a un viernes por la
noche para posar un poco en todas las bicicletas, luego conducir a este
club llamado Vertigo, un lugar hipster en el centro. Tomarı́amos Olympic
Boulevard hasta el inal, entrarı́amos allı́ y darı́amos una vuelta como si
fué ramos los dueñ os del lugar. Si las cosas iban bien y uno o dos pá jaros
quedaban impresionados, tal vez hubiera algo de succió n en el callejó n
despué s. Luego, alrededor de la una en punto, todos ı́bamos por caminos
separados. El gran paseo en bicicleta fue de cinco millas y eso fue todo.
No creo que ninguno de estos cabrones tuviera má s de 500 millas en sus
relojes, incluido yo.
Siempre me gustaron las motos. Tuve uno en Inglaterra cuando tenı́a
unos diecisé is añ os. Lo compré en la tienda de HP y creo que nunca hice
un solo pago. No era solo una moto, creo que era una Honda 650cc;
450cc por lo menos. Yo no tenı́a la idea de un buen riesgo crediticio,
pero supongo que a ellos no les importaba siempre y cuando
consiguieran la venta y luego se convirtiera en el problema de otra
persona. De cualquier manera, monté esta cosa hasta que se
descompuso y luego la dejé donde se detuvo. No tenı́a idea de lo que
estaba haciendo.
Cambiarme a una Harley una vez que llegué a Estados Unidos no fue
una traició n a mis raı́ces skinhead. Eran solo caballos para los cursos.
Veo a estos niñ os en Los Angeles ahora tratando de recrear la cosa mod
en sus scooters; hay toda una pequeñ a escena, pero realmente no
funciona si tienes que usar un casco. Para mı́, la moda no se trataba de
usar cascos; lo bueno era que todos podı́an verte. Todavı́a odio los
cascos, pero ahora tengo una gran colecció n y no me importa usarlos
porque he visto algunas de las cosas aterradoras que le han pasado a las
personas que no los tenı́an puestos. Todavı́a no uso la cara completa,
pre iero la cara abierta. Un tipo me está poniendo cuernos a uno ahora
mismo.
Tuve un par de accidentes de moto bastante graves. En 1986, cuando
estaba en las primeras etapas de la sobriedad, Linda, quien me ayudó a
comenzar ese curso, irmó conmigo para obtener una Harley-Davidson
Sportster. Eso fue cuando Nina todavı́a estaba cerca. Ella estaba en la
parte de atrá s, yo habı́a tomado un par de pintas (bueno, dije que eran
las primeras etapas de la sobriedad), y ninguno de nosotros usaba
cascos. No estaba ni cerca de estar borracho, pero aú n no conocı́a muy
bien las carreteras de Los Angeles.
Cuando nos prepará bamos para salir de Sunset en Crescent Heights,
me di la vuelta para decirle algo a Nina. Lo siguiente que supe fue que
habı́a un automó vil frente a nosotros que se detuvo para girar
ilegalmente y lo chocamos por detrá s. Nina estaba bien en la parte
trasera de la bicicleta, pero salı́ volando hacia los malditos arbustos y me
rompı́ la muñ eca. Me empujaron el brazo justo debajo de mı́ y me
tuvieron que suturar; tambié n hubo algunas preocupaciones sobre el
descanso. Fue a mi mano que rasgueaba. Los guitarristas no quieren
lesiones en la muñ eca, pero afortunadamente el hospital enderezó el
brazo bien, ası́ que me recuperé al 100 por ciento.
Corte a un añ o má s o menos, y estoy volviendo a casa desde la casa
de Justine Bateman en la cima de Laurel Canyon y Mulholland. Ella era
una gran actriz de telenovelas en ese momento y é ramos ocho en
bicicleta, todos estos niñ os actores, siendo tipos duros y dando la gran
'un. Creo que el ex ı́dolo adolescente Leif Garrett tambié n estaba allı́, por
alguna razó n. Está bamos descendiendo por el Cañ ó n cuando estos
pá jaros subieron por el otro lado en un automó vil solo por encima de la
lı́nea central, por lo que chocaron contra mı́. Mi bicicleta volcó conmigo
y Nina todavı́a en ella, ¡bosh! Me rompı́ la misma muñ eca y me tuvieron
que dar muchos puntos má s. Una vez má s, tuve suerte de que no hubiera
dañ os permanentes, o al menos nada que le robara a mi forma de tocar
la guitarra la sutileza por la que es mundialmente conocida.
A pesar de lo jodidos que eran en ese momento, en realidad
agradezco haber tenido esos choques, porque me hicieron muy
consciente de los peligros. Me siento mal por los motociclistas que no
conocen las cuerdas. Cuando veo a las personas que acaban de subirse a
sus bicicletas por primera vez y apenas pueden levantar los pies del
suelo, pienso: 'Oh, pobres cabrones, van a recibir un golpe, es solo un
cuestió n de tiempo.' Estoy tan agradecida, mis golpes podrı́an haber sido
mucho peores. Con el tiempo, adquieres experiencia para ver las cosas
antes de que sucedan, lo cual es necesario hoy en dı́a, con tantos
conductores de automó viles y camionetas demasiado ocupados
revisando sus mensajes de texto como para prestar atenció n a la
carretera.
De initivamente habı́a un elemento de moto en una de mis historias
favoritas de esa é poca. Un dı́a recibı́ una llamada telefó nica de Bob
Dylan. —Hola, Steve —dijo, como quiera que hable—. '¿Puedes armar
una banda?' No vino completamente de la nada. Hubo una especie de
fase de cortejo cuando me vio por la ciudad un par de veces y vino
corriendo y me abrazó . 'Oye, Steve', decı́a. Fue divertido porque Dylan
suele ser conocido por cubrir a todo el mundo, y la gente no podı́a creer
que me estuviera prestando toda esta atenció n. No estoy seguro de si era
porque a é l tambié n le gustaban las bicicletas o tal vez era un faná tico
secreto de los profesionales, pero de cualquier manera, hicimos una
sesió n una noche de marzo de 1987, en el famoso Studio 3 en Sunset
Sound en Sunset Boulevard (donde Jim Morrison se divirtió mucho en la
cabina), y fue la experiencia má s extrañ a.
Cuando Bob me preguntó , pensé : 'Está bien, veamos qué podemos
inventar'. Paul Simonon estaba pasando el rato en Los Angeles en ese
momento. Los Clash terminaron y é l andaba en moto y tonteaba con una
banda llamada Havana 3a.m. (El cantante era un geezer que conocı́a, que
ahora está muerto.) De todos modos, amaba a Simonon desde el
principio: siempre nos llevamos bien, y hay algunas buenas fotos de
nosotros montando motos juntos tratando de parecernos a James Dean.
Ası́ que estaba dentro. Luego estaba el baterista de Pat Benatar, Myron
Grombacher, que es un nombre muy bueno, estoy seguro de que estará s
de acuerdo, y tal vez un teclista que no recuerdo.
Llegamos allı́ por la mañ ana y montamos todo el equipo. Luego llegó
Bob y puso sus letras en el piano en una gran pila. El está parado allı́ con
su acú stica, yo y la banda estamos sentados esperando, y é l comienza a
murmurar a travé s de los acordes: 'C, uh D, uh G'. Solo querı́a que
tocá ramos y vié semos si algo empezaba a cocinarse, bá sicamente como
una jam band. Ahora, sé que esto funciona para algunas personas, pero
nunca antes habı́a hecho mú sica de esa manera. Por lo general, iba al
estudio sabiendo exactamente lo que estaba haciendo y luego
construı́amos la pista pieza por pieza. Ası́ que hubo un poco de choque
de culturas. Debió haber comenzado unas veinte canciones diferentes y
luego las cortó justo cuando nos ponı́amos en marcha. Consiguieron una
pista para el á lbum Down In The Groove y era una versió n de 'Sally Sue
Brown'. Fue un buen trabajo . No habı́a pasado toda mi vida esperando
que apareciera un coguionista de Bob Dylan, porque eso nunca se
materializó .
Lo que sucedió fue que Mickey Rourke apareció en el estudio con una
gran pandilla de nuestros compañ eros motociclistas. Estaba frente a la
ventana de vidrio de la sala de control y Dylan estaba frente a mı́ de
espaldas a la entrada. Mientras me habla, me doy cuenta de que Mickey
y una treintena de estos otros motociclistas entran pavoneá ndose.
Entonces Bob se da la vuelta para verlos a todos y hace una doble toma
masiva. Desearı́a que alguien lo hubiera ilmado, porque su rostro era
una imagen. No dirı́a que se sintió intimidado, pero no pasó mucho
tiempo antes de que se excusara y se fuera.
La forma en que la mú sica parecı́a sacarme de la oscuridad en esos
añ os era como cuando era niñ o y escuchar a Jimi Hendrix o Roxy Music
me dio un poco de esperanza. Trabajar con Roy Orbison fue uno de los
mejores. Eso tambié n sucedió alrededor de 1987-1988. Para entonces ya
habı́a irmado con el sello de Danny Goldberg, ası́ como con é l como
manager, y é l tambié n representaba a Roy, que estaba tratando de hacer
un á lbum en ese momento. Danny pensó que era una buena idea
juntarnos a los dos, ası́ que monté mi moto hasta Malibu para
encontrarme con el gran O un par de veces, y comenzamos a escribir
esta canció n en un casete.
'The Chains of Love', creo que se llamaba, pero no era una cosa de
bondage ya que Roy no estaba má s metido en esa mierda que yo. Estaba
saliendo bastante bien, y solo necesitaba unas pocas letras má s de é l y se
habrı́a hecho, pero desafortunadamente murió antes de que pudié ramos
terminarlo. Por supuesto, su esposa no pudo encontrar el casete, y luego
la casa se quemó . Ası́ que tal vez haya un casete en alguna parte con é l y
yo cantando en é l, y tal vez no lo haya.
Roy era un amor, muy suave y amable a su manera, uno de esos tipos
que sientes que nunca habrı́an perdido los estribos, y nos llevamos muy
bien. Tenı́a el comportamiento de un verdadero caballero sureñ o, y
de initivamente era el má s amable de todos los gigantes originales del
rock 'n' roll que he conocido. Fue una pena cuando murió . Recuerdo que
está bamos trabajando en la canció n en el piso de abajo de su casa y é l
fumaba cigarrillos a escondidas y decı́a: 'No se lo digas a mi señ ora'.
Simplemente no obtienes eso de Jerry Lee Lewis.
Llevaba dos añ os y medio limpio la primera vez que salı́ del
programa (la forma respetable de decir "volvı́ a ponerme en marcha")
durante un mes antes de volver directamente. Luego logré otros tres
añ os antes de que el volvió a pasar lo mismo. En los perı́odos en que
recaı́, no socialicé con nadie. No era como si me estuviera cayendo del
Viper Room a la alcantarilla; la gente probablemente pensó , 'Oh, mierda,
ha recaı́do', porque simplemente desaparecerı́a. Nadie me vio nunca
drogado, porque para entonces me daba vergü enza que me vieran no
sobrio. Simplemente me escabullı́ y me mantuve totalmente aislado
hasta que pude recuperarme lo su iciente como para volver a subir al
vagó n. Supongo que eso era una señ al de que habı́a tomado algo de eso a
bordo.
La razó n por la que seguı́ golpeando esa pared fue porque nunca
trabajé ninguno de los 12 pasos. Si no haces ningú n paso, eventualmente
terminará s cargado de nuevo, y eso es lo que hice. Durante los primeros
cinco añ os y medio, má s o menos, solo estaba bromeando, de verdad. Iba
a reuniones, recogiendo partes y piezas ú tiles en mi cabeza dura, pero
solo hablaba de boquilla porque era un lugar seguro y me gustaba la
atenció n que recibı́a de los pá jaros.
27. EL HOMBRE LOBO DEL ATARDECER
Entre mi primer á lbum en solitario que salió en 1987 y el segundo, Fire
and Gasoline , un par de añ os má s tarde : fue entonces cuando The
Wolfman estaba realmente en marcha. Entonces era delgado y estaba en
buena forma, ademá s tenı́a el pelo largo y me parecı́a a Fabio, ası́ que
podı́a tener sexo en cualquier momento. Sı́, fui a reuniones y me follé a
las chicas que conocı́ allı́, pero no tenı́as que ser un adicto para que yo
me follara a ti, yo era todo acerca de la igualdad de oportunidades.
Parte de eso fue que consumir drogas durante seis o siete añ os
amortigua esa parte de ti y no te preocupas tanto por el sexo. Entonces,
a medida que los efectos de la heroı́na desaparecieron y las viejas
vá lvulas de seguridad del alcohol y las drogas se cerraron, toda la
presió n comenzó a empujar en una direcció n. Estaba tan cachondo que
solo iba a las reuniones de 12 pasos en busca de un coñ o, lo cual no es
realmente una buena idea en té rminos de recuperació n. Una vez, en la
gran reunió n de los viernes en Rodeo Drive, una estrella porno llamada
Ginger, altamente cali icada en la lista de las 50 mejores estrellas porno
de todos los tiempos de Adult Video News , me la chupó en los bañ os.
¿Qué puedo decir? Fue una é poca romá ntica.
Solo puedes hacer eso durante tanto tiempo antes de que te des
cuenta de que todo es lo mismo. La naturaleza de la adicció n puede ser
diferente, pero si lo ú nico en lo que está s pensando es de dó nde vendrá
tu pró xima dosis o follar chicas en reuniones de 12 pasos realmente no
hace mucha diferencia, todavı́a te está s comportando de la misma
manera obsesiva. Supongo que la verdad era que realmente no habı́a
tocado fondo. Bueno, toqué algunos fondos, pero no el correcto.
Probé el programa de 12 pasos relacionado especı́ icamente con los
narcó ticos, pero no pude conectarme con é l. Simplemente parecı́an un
montó n de idiotas, superando las historias de los demá s para glori icar
su pasado. La mentalidad de yonqui completo es algo diferente a la del
alcohó lico regular, eso es seguro. Me doy cuenta de que esto puede
parecer un poco exagerado, dado que tuve un gran problema con la
heroı́na, pero incluso ahora, despué s de añ os de varios tipos de terapia,
sigo pensando en mı́ mismo como un alcohó lico que terminó
consumiendo heroı́na, en lugar de un drogadicto No creo que yo fuera
una de esas personas que, cuando está n un poco sobrias, todos saben
que volverá n a drogarse. Fue má s como una forma de escapismo para
mı́, del vacı́o que sentı́ despué s de que la banda terminó .
De lo que nunca pude escapar fue del efecto que el alcohol tenı́a en
mı́ cuando lo introduje en mi sistema, y el alcoholismo fue
de initivamente el camino por el que habrı́a seguido si la heroı́na no me
hubiera ofrecido el tipo de atajo que un faná tico de la bebida
instantá nea grati icació n como yo nunca iba a ser capaz de dejarla pasar.
Quizá s se pregunte, ¿cuá l es la diferencia entre volar en primera clase o
en clase turista cuando el destino es el mismo? Lo curioso es que solo las
personas que siempre han volado en clase econó mica hacen esa
pregunta.
Una vez que desaparecieron las dos muletas en las que solı́a con iar,
comencé a apoyarme cada vez má s en el tema del sexo. La mentalidad de
Los Angeles tiene mucho que ver con verse bien en el mejor de los casos,
y cuanto má s me metı́a en el papel de ser el tipo rockero en su bicicleta,
má s aumentaba mi resistencia natural de inglé s a los gimnasios y la
bú squeda del cuerpo. hermosa (la mı́a , es decir, siempre habı́a estado
feliz de perseguir la de otras personas) comenzó a desgastarse. Por
ridı́culo que parezca, dado lo mucho que estaba tratando de
mantenerme sobrio, incluso pasé por una fase en la que estaba tomando
esteroides para mejorar.
Solo hice un par de ciclos, no me volvı́ loco con ellos, y los resultados
fueron increı́bles. Funcionan muy rá pido, y puedo ver por qué la gente
se engancha con ese golpe de lo mucho mejor que te hacen ver, pero la
grati icació n instantá nea siempre ha sido mi perdició n. De initivamente
no recomendarı́a esteroides a nadie que intente limpiarse. Realmente no
te colocas con ellos, pero te alteran un poco la cabeza, aunque solo sea
hacié ndote enojar y llená ndote de testosterona, que nunca me ha faltado
exactamente. No estoy diciendo que los esteroides fueran 100 por ciento
la causa de mi segunda recaı́da, pero supongo que el hecho de que seguı́
haciendo algo que sabı́a que no era apropiado para la sobriedad te
muestra dó nde estaba mi cabeza.
Sin embargo, me veı́a bien en la fase de Fabio. Será difı́cil para
cualquiera que me conozca ahora aceptar esto, pero yo era bastante
vanidoso en esos dı́as: al pavo real le habı́an vuelto a crecer las plumas y
no le importaba a quié n se las mostraba. No sé có mo lo mides
exactamente, pero en esa fase de sobriedad a corto plazo entre las dos
recaı́das, dirı́a que, té cnicamente, probablemente era un adicto al sexo.
Si no pudiera sacar a una chica rockera en los clubes del Strip, darı́a
vueltas en mi camioneta hasta encontrar a una mujer que estuviera lista,
dispuesta y capaz. Para mostrarles lo dependiente que era del coñ o, una
vez estaba paseando por el valle temprano en la mañ ana cuando
comencé a ver cosas: veı́a malditos buzones de correo en la distancia y
me ijaba en que eran chicas. La peor parte fue que estaba sobrio como
juez en ese momento. Un juez de la vieja escuela que no bebe, no uno de
esos cabrones.
Conocer a Axl Rose fue otro hito improbable en mi largo camino
hacia la sobriedad. Estaba en mi bicicleta afuera del Rainbow un viernes
por la noche, tratando de tener sexo como de costumbre, y Axl
simplemente se acercó a mı́. Llevaba un gran abrigo de cuero y una
gorra militar y tenı́a los ojos jodidamente goo-goo sobre hablar
conmigo, lo cual fue un buen impulso para el ego. Todo era nuevo para é l
entonces, y solo querı́a pasar el rato. Debe haber sido en el momento en
que las cosas empezaban a despegar para Guns N' Roses, porque no
habı́a mucha gente a su alrededor tratando de conseguir su autó grafo,
pero yo sabı́a quié n era.
Muchos de esos tipos de las bandas de hair metal y thrash metal
dirı́an que les gustaba el punk cuando en realidad les gustaba el metal.
Pero mientras que Slash y los otros chicos de Guns N' Roses provenı́an
de entornos má s rockeros, Duff y Axl eran verdaderos faná ticos del
punk. Hablamos durante una hora má s o menos esa noche, y unas
cuantas veces despué s. Me gustaba mucho Guns N' Roses: eran una
banda real con un sonido de rock clá sico, no como los venenos de este
mundo. Y Axl era genial. Terminó cantando en la versió n de 'Did You No
Wrong' que estaba en Fire and Gasoline. Axl hace un verso, yo hago un
verso e Ian Astbury de The Cult hace un verso, como unir a tres
generaciones.
De repente, despué s de haber estado en el desierto durante casi una
dé cada, Sex Pistols recibió mucho amor de un grupo de bandas nuevas.
Mö tley Crü e y Megadeth hicieron versiones de 'Anarchy in the UK', y
Anthrax hizo 'God Save the Queen'. Tenı́a sentido porque de ahı́ venı́a su
mú sica. Para ser honesto, no me importaba demasiado el thrash metal,
pero fue una sensació n agradable recibir un poco de elogios, porque no
habı́a mucho de eso volando por un tiempo. Supongo que puedes oı́rme
recuperar mi con ianza en lo mucho má s rockero que es mi segundo
á lbum en solitario que el anterior. Sé que Fire and Gasoline no es del
gusto de todos, pero algunos entendidos lo veneran como la Piedra
Rosetta del metal motero. No realmente, lo hacen.
No hay una sala VIP en el programa de 12 pasos, como a algunas
personas les gustarı́a que hubiera. No importa si eres rico o pobre, gay o
heterosexual, blanco o negro, nadie es especial. Todos tené is una cosa en
comú n, que es el gen que os da un puto problema con el alcoholismo:
obsesió n mental, alergia corporal, como querá is llamarlo. Y me tomarı́a
una recaı́da má s para inalmente comprometerme completamente a
hacer algo al respecto. En cuanto a las recaı́das, no fue espectacular. No
toqué inalmente el fondo de la piscina y luego nadé hacia el oxı́geno con
todas las fuerzas que me quedaban. Era má s una especie de sentimiento
de 'Terminé ': 'No puedo seguir haciendo esto, ¿qué tengo que hacer para
parar?'
Tuve suerte de que cuando la moneda inalmente cayó despué s de
cinco o seis añ os de jugar, estaba mucho má s establecido de lo que habı́a
estado al comienzo del proceso. Ya no estaba jodidamente sin hogar y
pateando en un sofá , tenı́a un apartamento decente para vivir y
su iciente dinero de mis dos contratos discográ icos para pagar un
tratamiento adecuado. Fue gracioso que el dı́a en 1990 cuando hice la
promesa y lo dije en serio, el 28 de octubre, fue la misma fecha en la que
Never Mind the Bollocks… habı́a salido trece añ os antes. Pero no elegı́ ese
dı́a por su signi icado histó rico. Finalmente habı́a llegado el momento de
que realmente me atascara.
Si todas las personas que coquetearon con el programa de 12 pasos
realmente lo mantuvieran, esas reuniones serı́an como espectá culos con
entradas agotadas en el Staples Center. Con mi pequeñ a capacidad de
atenció n y mi historial de joderme cuando las cosas se ponı́an difı́ciles,
nadie me habrı́a elegido como uno de los pocos felices para los que
funcionarı́a el programa. No sé por qué me pasó eso a mı́ y no a tantos
otros. No puedo responder a esa pregunta. No era solo que yo fuera
afortunado. Tuve la suerte de estar vivo.
En Los Angeles, al menos entre las personas con las que tocaba, era
diferente en la comunidad gay, el SIDA solo parecı́a convertirse en un
gran problema a inales de los ochenta y principios de los noventa. Fue
entonces cuando realmente se sintió como un problema. Antes de eso,
contraer herpes parecı́a ser la mayor preocupació n. Los condones
simplemente no estaban en la agenda, y obviamente, con la cantidad de
gente que habı́a jodido sin ellos, estaba aterrorizado por la idea de que
podrı́as contraer el SIDA follando. Para ser honesto, creo que algunos de
esos riesgos se han exagerado cuando se trata de personas
heterosexuales, para no parecer discriminatorios, pero cualquier cosa
que involucre sangre y/o poner pollas en el culo de initivamente no es
una buena idea. Ası́ que he tenido má s de mis nueve vidas allı́, dada la
cantidad de mierda desviada que he hecho a lo largo de los añ os.
Tambié n esquivé algunas balas inyectá ndome heroı́na. La clave era
que nunca me rebajé para usar esas galerı́as de tiro que tenı́an entonces,
lo que bá sicamente signi icaba un balde viejo y sucio con un montó n de
agujas usadas y la gente simplemente golpeaba allı́ para obtener una
solució n de inmediato. Incluso si estaba enfermo y desesperado por la
droga, nunca hice eso; simplemente nunca me pareció correcto. Siempre
tuve mi propia aguja, aunque a veces se sentı́a como seguir tu propio
ejemplo en la sala de billar. Gracias a Dios seguı́ haciendo eso, porque un
montó n de gente que conocı́ son pan moreno por ir para otro lado.
El ú nico con el que no me salı́ fue la primera dosis en Londres todos
esos añ os antes, que estoy seguro es lo que me dio la hepatitis C, aunque
dicen que se puede contraer esnifando con una pajilla, todos ustedes Lo
que necesito es una pequeñ a partı́cula de sangre en el extremo de las
jodidas membranas nasales de otra persona. La otra gran forma de
infectarse fue a travé s de transfusiones de sangre en los hospitales. Un
montó n de gente completamente inocente lo tomó de esa manera.
Lo extrañ o de esa enfermedad es que en realidad no pasa nada que te
diga que la tienes, aparte de encontrarte durmiendo muchas siestas. No
sé si solı́a hacer eso antes de tener hepatitis C, pero parece como si
hubiera estado durmiendo siestas toda mi vida. Puede vivir con é l
durante añ os sin siquiera saberlo, pero afectará su sistema
inmunoló gico y el nivel de los sı́ntomas depende de qué tan saludable
esté en general. Se trata de limpiar tu hı́gado, ası́ que si sigues bebiendo
y fumando y dá ndote todo el dı́a, obviamente eso no va a ayudar. Si
continú a sobrecargando su hı́gado, eventualmente tendrá cirrosis,
momento en el cual necesitará un trasplante o tendrá cá ncer.
Gracias a Dios nunca llegué a esa etapa, pero si no hubiera
recuperado la sobriedad, habrı́a empeorado mucho. Todo se reduce a los
nú meros de algo llamado Viral Load, que no serı́a un mal nombre para
una banda de metal. El mı́o era algo ası́ como diez millones, lo que sea
que eso signi ique. Era alto, pero no crı́ticamente alto. Creo que lo que
me salvó de algo peor fue el hecho de que el lapso de tiempo que estuve
drogado fue relativamente corto: del 79 al 85, y luego cinco añ os de
sobriedad intermitente con dos breves recaı́das de un par de semanas
cada una. , antes de que inalmente lo hiciera realmente o icial.
He estado sobrio veinticinco añ os ahora, pero nunca ha terminado.
No es como si alguna vez llegaras al inal de los 12 pasos y pensaras, 'OK,
¡vamos a la iesta!' Es solo una forma de pensar que tienes que quedarte
adentro hasta el dı́a de tu muerte.
28. TERAPIA DE GRUPO
La principal diferencia entre la terapia de grupo y estar en una banda es
que en la terapia de grupo todos intentan ayudarse unos a otros. Está el
terapeuta, que supongo que serı́a como el manager en té rminos de
banda, aunque el cielo te ayude si Malcolm McLaren está guiando tu
recuperació n, y tres o cuatro cuerpos má s. El terapeuta se dirigı́a a usted
uno por uno y decı́a: 'Es su turno de hablar', los demá s escuchaban y
luego intervenı́an con sus respuestas. Eso puede sonar estresante si no
lo has hecho antes, pero en mi experiencia nunca hubo agresividad. Al
principio fue un desafı́o estar en el banquillo, pero se hizo má s fá cil
cuanto má s tiempo estuviste allı́, y tambié n fue bueno escuchar a otras
personas hablar sobre sus problemas. Eso de initivamente me ayudó a
abrirme.
Una vez que tuve la idea de hablar de estas cosas, no hizo mucha
diferencia para mı́ si estaba en un grupo pequeñ o, uno a uno con el
mismo terapeuta en su o icina, o de pie para hablar en una reunió n de
12 pasos. Cada una de las reuniones má s grandes tiene su propio
cará cter, y conozco el mapa de los diferentes grupos en Los Angeles
como la palma de mi mano. Es curioso có mo algunos de sus nombres
parecen recordar a bebidas -como Sundowners- y tienen diferentes
ambientes segú n la gente que los dirige. Algunos pueden volverse un
poco competitivos y estrellados, otros son má s enriquecedores.
Bread and Roses, la reunió n de ciervos (que solo signi ica que son
solo hombres, no muestran pelı́culas azules) en Brentwood, 'comparte
involuntariamente', lo que algunas personas encuentran un poco
terrible. Simplemente te señ alan y tienes que derramar tus tripas, lo
cual está bien si está s dispuesto a hacerlo, pero si no lo está s, puedes
preocuparte tanto en tu cabeza sobre el momento en que llegará tu
turno: 'Todo el mundo's me mirará n, y tendré que hablar delante de
ellos' – que no escuchas nada má s de lo que se dice. Eso es
de initivamente un rasgo alcohó lico, que obviamente verá s mucho en las
reuniones.
Está en la naturaleza del programa de 12 pasos que la gente trae
mucho equipaje. Y el hecho de que alguien esté tratando de estar sobrio
no impide que sea un imbé cil; todo lo contrario. Incluso dejando de lado
toda la actuació n que ocurre, si una persona era un imbé cil bebiendo,
hay muchas posibilidades de que tambié n sea un imbé cil sobrio. Se
necesitan añ os de pelar capas de la cebolla para llegar al bulbo má s
limpio, y mientras las personas derraman las lá grimas que son parte de
ese proceso, no necesariamente verá s lo mejor de ellas. Despué s de todo,
esta es la ú ltima casa en la maldita cuadra, si no entras, lo tienes, ası́ que
en té rminos de có mo interactú a la gente, tienes que esperar lo peor de
lo peor.
No me malinterpreten, sé que las personas agradables que han
tenido vidas difı́ciles tambié n ingresan al programa. Pero no son los que
tiendes a notar primero. Y toda la experiencia está lejos del buen
escenario de dos zapatos que palabras como 'compañ erismo' y 'poder
superior' podrı́an sugerir a los de afuera. El programa de 12 pasos no es
como los Scouts. No te ofreces como voluntario porque quieres ser un
buen chico: terminas allı́ porque no hay otro lugar adonde ir y es posible
que, si tienes suerte, hayas encontrado una taberna de ú ltima
oportunidad que te sirva algo má s que alcohol.
Mientras tanto, entran muchos idiotas que son egoı́stas y tienen sus
propias agendas manipuladoras (lo sé , porque yo era uno de ellos).
Cuando se ponen sobrios por primera vez, muchas personas se vuelven
locas, porque el enfoque central de sus vidas, ya sea el alcohol o las
drogas, no hace mucha diferencia, se ha ido repentinamente. Es casi
como si hubiera perdido su trabajo, y lo que el programa de 12 pasos le
brinda es algo para llenar el espacio que queda atrá s. De eso se tratan
los pasos, los rituales y la regularidad: encontrar una manera de evitar
que ese vacı́o interior te atrape. No es complicado, pero es difı́cil y no es
para todos.
Lo primero que tienes que hacer es entrar en el ritmo, pero luego la
novedad se desvanece y la monotonı́a se establece. Cuando todo
comienza a sentirse suave y sencillo, es probable que sea el momento en
que corres má s peligro, porque si te vuelves demasiado arrogante, está s
jodido. El programa lo mantiene alerta empujá ndolo en nuevas
direcciones. Si hubieras mirado quié n era cuando vivı́a en Nueva York
(en los 8×10 de la era Heart), la idea de dar charlas en hospitales y
prisiones hubiera parecido totalmente ridı́cula. Nunca hubiera tenido las
pelotas, o la motivació n, para hacer algo ası́ sin la con ianza que tengo al
ponerme de pie para hablar en las reuniones.
Me piden mucho que haga esto hasta el dı́a de hoy y, para mi
sorpresa, me he convertido en un orador bastante decente. Estaba
aterrorizado al principio y, a veces, incluso ahora, no quiero hacerlo,
pero me resultó má s fá cil levantarme y hablar en un contexto de 12
pasos que en cualquier otro lugar fuera de é l. Sabes que, en algú n nivel,
todos pueden relacionarse con lo que está s diciendo, por lo que
realmente no sientes que nada de lo que puedas decir pueda estar
'equivocado'. Creo que he tomado ese enfoque sin restricciones en la
radio conmigo en tiempos má s recientes (es divertido que un programa
de radio tambié n tenga patrocinadores, pero no de la misma manera que
un alcohó lico). Una cosa es segura, Jonesy's Jukebox es una de las muchas
cosas buenas en mi vida que nunca podrı́a haber sucedido sin los
cambios que el programa ha hecho en mı́.
Lo ú nico que garantiza ir a las reuniones es que, si te mantienes
irme, dejará s de beber (o lo que sea). Ordenar todo lo demá s depende
de usted, pero es sorprendente con cuá ntos aspectos diferentes de su
vida parece ayudar. Tenı́a un poco de equipaje con los gerentes en ese
momento, pero cuando estaba trabajando con Andy Taylor y haciendo
esos dos discos en solitario con Danny Goldberg, una mujer llamada
Anita Camarata habı́a entrado en escena. Estaba ayudando a Danny, y
era bueno empezar de nuevo con alguien que solo me conocı́a cuando
estaba sobrio. En el momento en que salı́ de ese acuerdo en solitario,
ella habı́a superado algunos de mis problemas de con ianza con la
gerencia (nunca debes entregarlos todos) y todavı́a estamos trabajando
juntos hoy.
A principios de los 90 formé una pequeñ a banda llamada Fantasy 7.
Eramos yo, un tipo llamado Mark McCoy en la voz y un par de otros
geezers que no eran del todo Sly 'n' Robbie en el bajo y la baterı́a. Me
gustaba Mark, era genial. Era una especie de aspirante a Iggy Pop en un
nivel, pero tambié n limpio y vegetariano (lo que lamentablemente no
impidió que muriera de cá ncer hace un tiempo). Una de las cosas
principales era que nos veı́amos geniales. Ya estaba harto del look de
Fabio, ası́ que todos nos afeitamos el pelo para parecer cabezas rapadas.
Fue divertido, de verdad, porque todos los demá s estaban haciendo esa
cosa grunge de pelo largo, por lo que nadie sabı́a si está bamos
adelantados o atrasados. Nuestra mú sica era rock 'n' roll punky de
regreso a lo bá sico, y todo fue muy divertido. Tocá bamos por la ciudad
de Los Angeles y aparecı́amos en una furgoneta para los conciertos.
Tambié n hicimos un par de noches en Buenos Aires, por extrañ o que
parezca, y hay algunos clips de nosotros tocando en un programa de
televisió n argentino.
Mi siguiente banda, The Neurotic Outsiders, llegó un poco má s tarde,
tal vez en 1994. Eramos otro de esos extrañ os supergrupos hı́bridos de
punks y rockeros, como Checkered Past, pero con mucho má s a nuestro
favor, sobre todo un guitarrista principal que no era t só lo en é l para su
pró xima solució n. Todo comenzó cuando Matt Sorum, el baterista de
Guns N' Roses, quiso hacer una obra bené ica para un tipo que se habı́a
vuelto sobrio pero tenı́a cá ncer. Hicimos el primer show en el Viper
Room y la formació n é ramos yo, Matt, Duff McKagan y John Taylor de
Duran Duran en el bajo (que no debe confundirse con Andy, con quien
trabajé antes. John es realmente un buen bajista de rock que toca con los
dedos, lo que da un sonido mucho má s cá lido que una pú a).
Hicimos un montó n de canciones y mi amigo Ian Astbury se levantó y
se unió a nosotros. La gente realmente disfrutó el espectá culo, y se
convirtió en una residencia que se prolongó durante un tiempo en 1994-
1995 y era el lugar para estar un lunes por la noche en Los Angeles
(habı́amos elegido bien el dı́a de la semana, ası́ que habı́a no hay
demasiada competencia). Mucha gente que conocı́a se levantó e hizo
nú meros con nosotros: Iggy, Chrissie Hynde, Idol. Uno de nuestros
clientes habituales era Guy Oseary, quien por suerte para nosotros
dirigı́a el sello de Madonna, Maverick. Le encantaba todo el alboroto y
para celebrarlo nos dio un milló n de dó lares para hacer un disco. Es
extrañ o cuá nto dinero volaba por ahı́ en ese momento; hoy en dı́a no
obtendrı́amos ni un milló n de pesetas. Y Guy es el má nager de Madonna
y U2 en estos dı́as, ası́ que tampoco le ha ido tan mal.
Nos divertimos mucho haciendo ese disco, y creo que podrı́a haberlo
hecho bien si todos hubié ramos estado presentes para darle el impulso
adecuado. Pero se hablaba de que Guns N' Roses volvı́a a estar juntos, ası́
que Duff tuvo que ensayar para eso, y yo tenı́a algunos asuntos propios
de la reunió n que atender para entonces. Terminé exprimiendo un
montó n de fechas de Neurotic Outsiders en un descanso de tres semanas
en medio de la gira mundial Filthy Lucre de Sex Pistols en 1996. Estaba
hecho polvo despué s de ese añ o, pero fue muy bueno para mı́
inancieramente, y me preparó hasta el punto en que pude comprar la
casa en Benedict Canyon donde todavı́a vivo hoy. Yo tenı́a cuarenta por
entonces, ası́ que ya era hora de que viera algo adecuado. Si hubiera
tenido alguno en el pasado, probablemente habrı́a ido directamente a mi
brazo de todos modos, ası́ que estaba aú n má s agradecido cuando
inalmente apareció y estaba lo su icientemente sobrio como para no
desperdiciarlo.
Habı́amos tratado de volver a estar juntos y hacer algunos shows
antes, pero Lydon puso a los burladores por alguna razó n. No estoy
seguro de por qué John cambió de opinió n cuando lo hizo; tal vez
necesitaba un dó lar o su gerente lo convenció . De cualquier manera, en
ese momento estaba siendo atendido por un tipo llamado Eric Gardner,
que era bastante sensato, ası́ que una vez que las cosas se pusieron en
marcha, todos los arreglos se realizaron sin problemas. John era
bastante controlador, pero mucho má s liberal de lo que es ahora.
Cuando todos los casos judiciales inalmente terminaron diez añ os
antes, los Sex Pistols como negocio se dividieron en cuartos, y el ú ltimo
se dividió entre los parientes má s cercanos de Glen y Sid (simplemente
no mencionen quié n tocaba el bajo en el á lbum). . Al principio eso se
referı́a a su madre, Anne Beverley, luego, cuando ella murió en 1996, se
lo dejó a su hermana; luego ella murió poco despué s y se lo dejó a otra
persona. Luego murieron, y pasó a uno de los niñ os muy lejos en el á rbol
genealó gico. Di lo que quieras sobre esa familia, no viven mucho, y Sid
ha sido mucho menos problemá tico en la muerte que en la vida.
Su madre era un personaje complejo, pero siempre se portó bien
conmigo y yo me llevaba bien con ella, al igual que, ú tilmente, Anita.
Incluso le compré el bajo de Sid a Anne por mil dó lares. Ella dijo: 'Mira,
ha estado debajo de mi cama durante diecisiete añ os, creo que alguien
deberı́a tenerlo'. Dije que lo harı́a y ella preguntó cuá nto valı́a, ası́ que le
dije mil dó lares nuevos, lo cual era cierto. Cuando accedió a vendé rmela,
hice que un servicio de mensajerı́a me la devolviera al dı́a siguiente,
antes de que cambiara de opinió n. Creo que solo tenı́a dos de los
blancos. Dejó uno en un taxi y este es el otro, con la correa que dice 'Sid'.
Todavı́a no lo he azotado, pero me han ofrecido doscientos de los
grandes. Obviamente, eso parece una gran ganancia en papel, pero tenga
en cuenta que jugué mucho má s que é l. Cuando lo miras de esa manera,
fue una jodida libertad que tuve que pagar tanto como mil dó lares por
ello.
En lo que respecta a la reunió n de los miembros vivos de la banda, en
realidad estuvo bien. De acuerdo, todos nos habı́amos cubierto bastante
a lo largo de los añ os, John y Glen no se habı́an contenido exactamente
en sus libros, y creo que John todavı́a estaba resentido por la forma en
que terminó la banda, pero decidimos ponernos. Deja todo eso a un lado
y sé corté s. Lo ú nico que Glen habı́a hecho que me molestaba era
a irmar que é l era el humilde compositor que escribió todos los é xitos,
pero dada la mala manera en que lo habı́an tratado despué s de que John
y Malcolm lo sacaron de la banda, realmente no podı́a culparlo. é l por
eso.
Una cosa que me gustarı́a aclarar es que estoy tan seguro como un
hombre con una memoria tan mala como la mı́a de que la historia que
Lydon puso en su libro sobre có mo me metı́ en el sá ndwich de Glen y lo
engañ é para que se lo comiera no es verdadero. Supongo que John solo
dijo eso para causar una mierda entre nosotros, lo cual fue una pena,
porque la materia prima de esa historia era en realidad una escena muy
dulce que se parecı́a má s a algo de The Waltons . Una vez, cuando Glen se
hospedaba en la calle Dinamarca, le estaba dando consejos sobre
té cnicas de masturbació n antes de que se fuera a dormir. Es un servicio
que me gusta brindar; consulte el libro de Glen si no me cree.
Le estaba diciendo que si cortas la parte superior de un pan sin
rebanar (Mother's Pride no funciona tan bien), sacas un poco del pan y
lo llenas con agua tibia, a temperatura ambiente, no hirviendo, luego lo
tiras, en realidad se siente como un coñ o. Todo es parte de hacer algo
con tu polla sin que tu mano la toque, que siempre ha sido tan
importante para mı́. Puede obtener un efecto similar con una libra de
hı́gado, pero de esa manera es má s costosa y la carne se echa a perder
rá pidamente: adquiere rigor mortis. No digo que decirle esto a Glen
cambiara su vida, como tampoco lo hicieron los consejos sexuales que le
di en Brighton, pero si quisieras saber por qué John consideró oportuno
torcer el recuerdo inocente de nuestro amistoso intercambio de
informació n en algo oscuro. y cruel, probablemente tendrı́as que
preguntarle.
De todos modos, volvamos a la mú sica. Despué s de toda la mierda
que habı́a pasado con Sid, era extrañ o volver a Matlock en el bajo, pero
tambié n un gran alivio. Creo que tambié n le hizo descansar un fantasma
a Glen, y fue bueno tener de nuevo en el escenario a la formació n que
escribió las canciones. Cuando los Sex Pistols tocaron en Finsbury Park
en junio de 1996, muchas personas allı́ eran demasiado jó venes para
recordar los pocos shows que hicimos la primera vez: muchos de esos
niñ os ni siquiera habı́an nacido cuando tocá bamos en el 100 Club y The
Screen on. el verde.
Los shows que hicimos de 1975 a 1978 rara vez fueron para
multitudes que realmente querı́an vernos. Los conciertos de SPOTS y tal
vez la Universidad de Brunel cerca del inal fueron algunas de las pocas
veces que recuerdo que estuvimos frente a grandes multitudes que
estaban emocionadas de estar en una habitació n con nosotros. Luego
fuimos a los Estados Unidos y volvimos al punto de partida con los
vaqueros enojados. Ası́ que 1996 fue nuestro momento para obtener
algo de reconocimiento por parte de los apostadores. Ademá s, podı́amos
jugar mucho mejor con Matlock que con Sid, por lo que las personas que
se acercaron a nosotros má s tarde obtuvieron una pequeñ a boni icació n.
Como en cualquier gira, hubo algunos momentos horribles, como
cuando tocamos frente a 100,000 personas en el Festival de Roskilde en
Dinamarca y una pequeñ a multitud de idiotas seguı́a tirá ndonos botellas
de sidra. Les dijimos que se detuvieran porque era muy peligroso, pero
no lo hicieron, ası́ que nos jodimos con la tercera canció n. Hubo otro
espectá culo en el festival en el que era el cumpleañ os de Cookie y Rotten
empezó a celebrarlo tres horas antes del concierto y estaba tan
impresionado cuando subimos al escenario que fue un desastre total.
Pero para ser justos con é l, solo sucedió una vez. Era bastante bueno en
no beber antes de los conciertos, lo cual fue un alivio, ya que olvida
todas las palabras cuando lo hace.
Las fechas americanas fueron una excelente manera de convencer a
todas las personas que fueron al concierto de Winterland (o dijeron que
lo hicieron) y pensaron que no podrı́amos lograr un gran espectá culo.
Comenzamos en Red Rocks en Colorado, ese fue uno bueno. Luego hubo
tres espectá culos en Los Angeles: dos en el Palladium y uno en el
Universal Amphitheatre. Todos los chicos punk salieron e hicieron lo del
mosh-pit y hubo algunos buenos momentos. El ú nico error real que
cometimos fue dejarlo pasar demasiado tiempo. Japó n y Australia
estaban bien, pero cuando llegamos a Brasil y Argentina, las viejas
tensiones estaban comenzando a surgir (y no de una manera
creativamente satisfactoria). Blow habı́a entrado en escena y todo el
ambiente se volvió oscuro y feo. En el show inal en Chile, está bamos tan
jodidamente hartos el uno del otro como lo habı́amos estado cuando la
banda se separó por primera vez.
29. NO DORMIR HASTA
HAMMERSMITH
No volverı́amos a tocar en vivo hasta Crystal Palace, seis añ os despué s.
Ası́ de ansiosos está bamos los cuatro de pasar má s tiempo juntos.
Mientras tanto, dejé de fumar.
Sorprendentemente, lo logré en la primera vez que pregunté . Nunca
lo habı́a intentado antes porque todo lo que habı́a oı́do de la gente era
que rendirse era una pesadilla, pero fui a un hipnotizador y no fue tan
malo. Kerry Gaynor, el viejo era el nombre, y tenı́a una o icina en Santa
Mó nica. Son tres visitas en total. El primero por el que en realidad no
dejas de fumar, simplemente vas y te sientas en su silló n reclinable Lay-
Z-Boy y te habla sobre todas las razones por las que quieres dejar de
fumar y por qué no es bueno fumar. Me estaba convenciendo de dejar de
fumar, pero é l tiene una respuesta para todo.
Luego dice: 'Ahora, vas a bajar', y cuenta hacia atrá s, '10, 9, 8...' para
ponerte a dormir como lo hacen en las pelı́culas. Pensé que solo estaba
jugando con eso, pero tal vez estaba jodidamente hipnotizado y no lo
sabı́a; todo lo que sé es que renuncié y no he vuelto a fumar desde
entonces. Estoy jodidamente agradecido porque odio los cigarrillos y
hasta que dejé no me di cuenta de lo mierda que era fumar. Ahora es
té cnicamente ilegal encender un cigarrillo en cualquier lugar de Beverly
Hills; no es como en Europa, no se puede fumar en los restaurantes. Por
supuesto, mucha gente todavı́a lo hace, pero si un policı́a quisiera ser un
gilipollas (lo que obviamente muchos de ellos hacen), podrı́a darte una
multa.
Habı́a dejado todo lo demá s, excepto las prostitutas y los pasteles de
crema, pero nunca pensé que serı́a capaz de dejar los cigarrillos atrá s.
Siempre estuvo implantado en la parte posterior de mi cabeza: incluso
inconscientemente, todavı́a estaba esta voz que decı́a: 'Estoy comiendo
toda esta comida saludable pero sigo fumando, no tiene sentido'. Querı́a
parar, pero no creı́a que fuera posible. No pensé que era lo
su icientemente bueno. Pensé que seguirı́a fumando hasta el dı́a de mi
muerte, ası́ que el hecho de que haya pasado quince añ os sin fumar es
un milagro para mı́.
Por supuesto, sigo comiendo como un adicto. Ese es el ú ltimo
maldito, el asunto de la comida. Lo del coñ o se calmó un poco, aunque
todavı́a tengo episodios en los que quiero actuar con pá jaros que son
extrañ os. Es extrañ o có mo esos dos rebotan: si no tengo ningú n coñ o,
comeré má s, pero si lo hago, no comeré tanto. Pensá ndolo bien, tal vez
sea lo mismo para todos.
El robo pareció desaparecer por sı́ solo una vez que ya no necesitaba
dinero para la droga. Obviamente no habı́a sido ası́ como empezó , pero
ası́ fue como terminó , y la humillació n del episodio de la chaqueta de
cuero de Des Barres era algo que nunca querı́a volver a sentir. Ademá s
de eso, vi un documental de televisió n sobre lo que sucede en las
prisiones estadounidenses que me asustó muchı́simo. Podrı́as pensar
que tengo un poco de frente con los tatuajes y las bicicletas y todo, pero
cuando se trata de empujar, soy un completo cobarde.
He dado charlas en la cá rcel del condado de Los Angeles un par de
veces, una experiencia que no me animó a volver a mis viejas
costumbres. Tambié n hablé en un panel en Wandsworth Nick cuando
estaba de regreso en Inglaterra para el show de Crystal Palace, y
nuevamente cuando hicimos cinco noches en Brixton Academy, cinco
añ os despué s. Por lo general, obtienes una buena participació n con una
audiencia cautiva, aunque nunca sabes si es porque la gente quiere estar
sobria, les gusto porque estuve en los Pistols, o probablemente solo
porque quieren salir de sus celdas por un tiempo. . De cualquier manera,
los apostadores parecieron apreciarlo y no obtuve ninguna rareza, pero
me alegré cuando pude salir de allı́.
Lo mismo ocurrı́a con esos lotes adicionales de shows de los Pistols,
aunque el conteo de rarezas siempre aumentaba un poco al inal.
Afortunadamente, tuvimos el buen sentido de programar algunas giras
má s cortas, por lo que tuvimos un par de semanas ocupadas en Estados
Unidos en 2003, con un buen espectá culo en mi cumpleañ os en War ield
en San Francisco cuando Rotten hizo que la multitud me cantara
'Cumpleañ os feliz'. . Hará algo bueno como eso de vez en cuando, solo
para mantenerme adivinando. Las fechas de 2007 en Gran Bretañ a
tampoco fueron tan malas, porque solo hicimos los shows en Brixton
Academy, luego uno en Manchester y otro en Escocia.
Lo que hemos aprendido con Johnny es que por lo general comienza
bien una gira, porque está nervioso, ası́ que se porta bien, a veces nos
reı́mos. Pero luego nos ponemos bien, é l se vuelve arrogante y todo se va
a la mierda. Nunca sabré por qué olvidamos esa importante lecció n
cuando está bamos programando la gira extendida de tres meses para el
verano de 2008 que bá sicamente nos jodió para siempre. Pero antes de
llegar a esa horrible pesadilla, estaban sucediendo algunas cosas
importantes en mi vida fuera de la mú sica con las que necesito ponerte
al dı́a.
Todo comenzó con un in de semana de hombres de Justin Sterling.
Oliver Leiber (el hijo de la mitad Leiber del gran equipo de compositores
Leiber y Stoller), que era alguien a quien conocı́a, pasó por uno y sugirió
que serı́a bueno que lo hiciera, ası́ que fuimos juntos. Fue en Oakland en
este gran templo masó nico. Son edi icios brillantes, me encantan esos
lugares. Aunque ya no tengo ningú n vı́nculo con el Instituto Sterling,
seré un poco vago sobre los detalles de lo que sucedió el in de semana,
porque no quisiera estropearlo para nadie que pueda asistir.
Justin es un personaje bastante controvertido, pero para mı́ fue una
experiencia increı́ble. Para empezar, era la primera vez que me permitı́a
llorar en pú blico. Nunca antes habı́a derramado una lá grima en una
reunió n o en una terapia; si sentı́a que me brotaba, simplemente la
humedecı́a y salı́a corriendo lo antes posible. Pero en esa atmó sfera
intensi icada, cuando un tipo en el medio comenzó a gritar, solo
enfureció a todos los demá s. Habı́amos estado aprendiendo todas estas
cosas buenas sobre no dejar que las mujeres tomen nuestras bolas.
Entonces, de repente, todos lloramos por nuestra propia mierda, y se
sintió bien. Ese fue uno de los grandes bene icios de todo esto para mı́:
tener un puto respiro para contenerlo todo.
Tampoco se trataba solo de un in de semana. A veces, tenı́as que ser
un miembro del personal, lo que signi icaba vigilar la puerta los ines de
semana para que nadie pudiera salir corriendo; a veces se vuelve
bastante incó modo allı́. Estaba jodido despué s de estar de pie durante
doce horas haciendo eso. Ademá s cuando se hacen esos dos primeros
dı́as, te ponen en un equipo segú n de dó nde eres. Tienes que pensar en
un nombre para el grupo y luego reunirte todos los ines de semana y
hacer algo para mejorar. Duré un añ o completo, ası́ que se nota que
aproveché mucho.
Lo que aprendes en el grupo es en su mayorı́a mierda de viejos de la
vieja escuela, como de los añ os cuarenta y cincuenta, que con suerte te
convierte de un tipo en un caballero. Una de mis grandes debilidades en
la vida solı́a ser que siempre llegaba tarde. Nunca pensé que fuera un
gran problema hasta que llegué tarde una vez al equipo y me hicieron
responsable de ello. Como una especie de castigo, me hicieron cantar
frente a un restaurante lleno de gente. Solo tenı́a que pararme allı́ y
cantar a todo pulmó n una canció n; fue peor que ese concierto en Salter's
Cafe en el 75, porque ni siquiera tenı́a un micró fono.
Joder, lo odiaba, pero lo hice. Esta vez no hubo versiones de Rod
Stewart : busqué algo un poco menos predecible y canté 'Michael, Row
the Boat Ashore', que era casi lo ú nico que recuerdo de la escuela. El
resto del equipo se quedó afuera mirando para asegurarse de que lo
hiciera, y nunca má s volvı́ a llegar tarde. Esa mierda te convierte en un
hombre.
Una gran parte de lo que Justin Sterling te enseñ a sobre respetarte a
ti mismo fue 'perdona a tus padres', ası́ que traté de aplicar eso a mi
padrastro, ya que parecı́a ser el ú nico jugador en la ciudad en esa
divisió n.
Al principio de mi sobriedad, siguiendo el consejo de un terapeuta, le
envié una carta a mi madre explicá ndole lo del violı́n. Finalmente,
contarle a alguien lo que me habı́a pasado en Benbow Road me habı́a
quitado un poco de peso, ası́ que pensé que valdrı́a la pena llevar el tema
de la apertura un poco má s allá . Desafortunadamente, chocamos contra
una pared de ladrillos. No sé si Ron interceptó la carta, o qué pasó , pero
recibı́ una respuesta de mi madre que bá sicamente decı́a: '¿De qué está s
hablando?' Estaba lleno de todas las negativas habituales que parecen
ocurrir cuando llaman a la gente por esa mierda. Supongo que ella
simplemente no querı́a lidiar con eso.
La pró xima vez que me encontré con mi madre y Ron despué s de que
esto sucedió , habı́a pasado bastante tiempo desde la ú ltima vez que los
habı́a visto. Parecı́a un tipo tan dé bil y yo parecı́a mucho má s grande que
é l que me di cuenta de que la relació n de poder estaba al revé s. Ahora yo
era el tipo grande y é l era el que se estaba cagando. Entonces, como
habı́a hecho esto de Justin Sterling y estaba tratando de ser el mejor
hombre, lo abracé y é l se convulsionó como si pensara que le iba a clavar
un cuchillo, esa fue la sensació n que tuve. obtuvo.
Fue el ú nico abrazo que le di, y no estaba dispuesto a darle otro
despué s. Para ser honesto, no fue mi instinto tratar de reconciliarme con
é l, ası́ que supongo que solo estaba siguiendo los consejos de otras
personas, pero al menos lo intenté . Desafortunadamente, realmente no
sentı́ ningú n bene icio de ello. Todavı́a odiaba al capullo y me costaba
mucho perdonarlo. Siempre he sentido que lo que hizo me dirigió en una
direcció n que signi icaba que hasta el dı́a de hoy no soy bueno para
mantener relaciones con mujeres. Obviamente tengo que asumir la
responsabilidad de mis propias acciones en la vida adulta tambié n; No
todo es culpa de Ron. Pero es difı́cil perdonar a alguien que ni siquiera
admite lo que ha hecho mal. Y ahora es pan integral, ası́ que eso nunca
va a suceder; no es que estuviera realmente en las cartas de todos
modos.
Sin embargo, habı́a un lado má s positivo en mi iniciativa de 'perdonar
a los padres': unos añ os má s tarde logré localizar y conocer a mi
verdadero padre. Deberı́a decir al principio que no fue idea mı́a hacer
esto, pero al inal me alegré mucho de haberlo hecho. Uno de los grandes
bene icios de la sobriedad es que tengo algunos amigos que no está n
jodidos, y dos de los mejores son una pareja llamada Laurie y Richard,
que tienen un lugar encantador en Malibú donde yo ir y quedarse a
veces. Los conocı́ antes de que su negocio despegara y son una especie
de familia normal con niñ os y todo; me recibieron en su casa al igual que
lo hicieron la mamá y el papá de Cookie. Es lo mismo de 'Lonely Boy':
nada cambia, excepto que algo cambió , y todo se debió a Laurie. Me
habı́a contado sobre el primo holandé s de su padre cuyo trabajo
consistı́a en rastrear personas, a veces de familias que habı́an sido
separadas desde la Segunda Guerra Mundial. No estaba seguro de si esto
era una lata de gusanos que realmente querı́a abrir, pero Laurie siguió
presioná ndome, hasta que inalmente le di el nombre de Don Jarvis y
toda la informació n que tenı́a, que no era mucha.
Volvió a verme un par de veces en el transcurso de un añ o y
inalmente me llamó y me dijo: 'Lo encontré '. Buscó una foto de mi papá
boxeando y luego lo llamó , diciendo que estaba haciendo un documental
sobre boxeadores a icionados, para comprobar que era el tipo correcto,
pero mi papá lo resolvió de inmediato. Creo que tal vez uno de los hijos
de su hijo lo habı́a adivinado porque era un faná tico del metal que habı́a
visto el documental de Sex Pistols The Filth and the Fury , donde
menciono su nombre. Me alegré de que cuando el tipo holandé s le dijo
que su hijo querı́a hablar con é l, simplemente dijo: 'Sı́'. Mi mayor temor
era que me dijera: 'No, vete a la mierda, no quiero tener nada que ver
con é l'... otra vez . Una vez en la vida es su iciente para esa mierda.
De todos modos, lo llamé y hablamos por telé fono. Fue una sensació n
muy extrañ a, hablarle por primera vez de esa manera. Dado que la
banda se estaba preparando para la gran gira en ese momento, fue
bastante simple hacer arreglos para encontrarnos con é l una vez que
todos nos hubié ramos instalado en Londres. Cogı́ un tren hasta
Nottingham (donde vivı́a) y lo encontré en la estació n, luego fuimos a un
café a la vuelta de la esquina y charlamos durante probablemente dos
horas, antes de volver a tomar el tren hacia el sur.
Cuando estaba mirando a la multitud para encontrar a mi padre en la
estació n, supe quié n era de inmediato. Estaba bastante arreglado, con
una rebeca puesta y una camisa y corbata debajo. Sentı́ que se habı́a
esforzado con lo que llevaba puesto, lo cual me pareció lindo. Hablar con
é l fue un poco estresante al principio, pero una vez que nos sentamos y
comenzamos a conversar correctamente, se sintió normal. Pensando en
retrospectiva, fue divertido que no se sintiera má s extrañ o, ya que esa
mierda no te sucede todos los dı́as.
Si nos vieras a los dos parados uno al lado del otro, creo que
probablemente adivinarı́as que Don era mi papá . Me recordó un poco a
mı́ mismo: tiene las mismas facciones atractivas, su voz es exactamente
igual y muchos de sus gestos me resultan bastante familiares.
Obviamente, esa fue una experiencia nueva para mı́, ya que siempre
habı́a sentido que estaba sola en el mundo, sin hermanos ni hermanas ni
nada. Yo no dirı́a que fue confuso; lo surrealista fue que, como nunca
habı́a estado con é l desde que era un bebé , me sentı́ como ese bebé por
dentro otra vez, aunque tenı́a cincuenta y dos añ os en ese momento.
Empezó a disculparse por no haber estado presente, pero le dije: 'No
estoy aquı́ para disculparme, solo tenı́a curiosidad por saber có mo eras,
si estabas saludable y si todavı́a tenı́as tu cabello'. Todavı́a lo tenı́a, ası́
que eso es un buen augurio, y parecı́a un tipo lo su icientemente feliz,
recibı́ una buena vibra de é l. Resultó que lo habı́an enviado a
Nottingham para hacer el Servicio Nacional poco despué s de que yo
naciera, y poco despué s conoció a la mujer con la que se casó y han
estado juntos desde entonces. Ası́ que no es como si fuera un capullo
que andaba por ahı́ follá ndoselo todo, como hice yo. Tiene dos niñ os y
una niñ a, todos adultos ahora, con sus propios hijos, que supongo que
son mis medio hermanos y mi media hermana, aunque no siento mucha
conexió n con ellos.
Hablé con é l por telé fono un par de veces despué s de nuestra
primera reunió n, y eso fue todo. Supongo que serı́a agradable volver a
encontrarme con é l en algú n momento, ahora que el polvo se ha
asentado. Tal vez entonces realmente pude verlo, porque fue algo muy
intenso, conocer a tu papá , quien te hizo suceder, y sentı́ que todo se
desarrolló en una niebla. Pero creo que es demasiado tarde en el juego,
ahora, para que tengamos algú n tipo de relació n real. Un lobo solitario
no puede cambiar sus manchas.
Sin embargo, me alegro de haber podido inalmente hablar con é l, ya
que fue una experiencia muy positiva. De hecho, no hubo aspectos
negativos al respecto. Fue una de esas grandes cosas, como obtener una
cuenta bancaria y una licencia de conducir, y aprender a leer y escribir
correctamente, que nunca hubiera sucedido si no hubiera estado sobrio,
porque no lo habrı́a seguido. ¿Me cambió mucho? No me parece. No
hubo un gran destello de iluminació n donde de repente tuve una nueva
imagen de mı́ mismo en mi mente.
Supongo que nunca me ha resultado demasiado difı́cil ponerme en el
lugar de mi padre.
¿Se fue a la mierda?
Sı́.
¿Fue algo horrible de hacer?
Realmente no.
Si no está s enamorado de alguien y has tenido sexo por capricho y
ella queda embarazada, ¿qué vas a hacer? No creo que deba enojarme
por eso. A pesar de todos los gemidos de mi madre a lo largo de los añ os,
lo cual tambié n puedo entender, desde su punto de vista, se calmó
despué s, lo que demuestra que era un buen tipo. En general, no tengo
ningú n rencor contra Don Jarvis en absoluto.
Una cosa que tengo ahora es una foto de é l en el ring. Está un poco
deshilachado en los bordes, pero eso no importa. Creo que su ré cord de
boxeo fue que perdió má s veces de las que ganó , por lo que no es una
situació n de 'podrı́a haber sido un contendiente'. Tambié n hay una foto
má s clara, de é l y sus compañ eros cuando era joven, donde todos está n
vestidos como Teddy Boys afuera de un boozer. A Malcolm le hubiera
gustado ese.
Y hablando de Malcolm, conocer a mi papá me trajo a la mente un
incidente de la é poca en que estuve por primera vez en su tienda. Una
vez una chica vino a los pisos de Battersea cuando yo no estaba allı́ y le
dijo a mi madre que la habı́a dejado embarazada. Recuerdo haberla
follado en Battersea Park una noche cuando ı́bamos caminando a casa
desde King's Road despué s de estar en el pub Bird's Nest. Estaba cerca
del puesto de perritos calientes de Chelsea Bridge, donde solı́an pasar el
rato los Teddy Boys. Volvimos a los pisos, supongo que me la follé de
nuevo, luego se fue por la mañ ana, y ese fue el inal de la historia, por lo
que yo sabı́a.
Entre ese momento y el momento en que recobró la razó n, tuve esa
pelea con mi padrastro y me fui a la mierda, ası́ que no me enteré de esto
hasta má s tarde. Y mi madre me dio mensajes contradictorios sobre si la
niñ a terminó teniendo el bebé o recibiendo el dinero para un aborto.
Entonces el rastro se enfrió . Entonces, por lo que sé , podrı́a haber al
menos una persona adulta cuya existencia depende de mı́ de la misma
manera que la mı́a dependı́a de la de mi padre. Serı́a un milagro si no lo
hubiera, realmente, dadas las circunstancias.
Estuve en Londres durante la gran gira del verano de 2008, ası́ que
fui a ver a mi madre varias veces. No me gusta volver a Inglaterra.
Incluso cuando estoy trabajando, que es la ú nica razó n por la que estarı́a
allı́, ese niñ o solitario sigue apareciendo de nuevo. Hay muchas cosas
muy arraigadas dentro de mı́ que no parecen ir a ninguna parte. En esta
ocasió n estaba tratando de enfrentarlo y no salió muy bien, ası́ que
terminó siendo un momento bastante oscuro para mı́.
Tenı́a mucha mierda con la que lidiar, y lo ú nico que probablemente
un mé dico no recetarı́a a una persona en esa situació n serı́an tres meses
de Johnny Rotten. Acepté hacer la gira sobre la base de que no
viajarı́amos juntos y no tendrı́a que verlo entre presentaciones. Por
supuesto que nunca iba a ser ası́. Tenı́amos nuestra base en Londres y
luego volá bamos para hacer festivales los ines de semana en los peores
lugares de mierda del antiguo bloque del Este: Rusia, Eslovaquia,
Estonia, Polonia. Tratar con John en esas situaciones era una pesadilla.
Lo peor que puedes escuchar cuando está s esperando en el
aeropuerto para ir a algú n lado con é l es 'El vuelo de tal y tal se ha
retrasado', porque entonces sabes que va a empezar a beber y la
oscuridad va a descender. La mayor parte del tiempo está s en vuelos
chá rter, no en jets privados, en jodidos miniaviones con una tripulació n
de unas veinte personas a bordo y un accesorio sujeto con una goma
elá stica. Al principio está bamos en uno de estos vuelos y por alguna
razó n, tal vez é l era un faná tico, el piloto dejó que Rotten fumara en la
parte delantera de la cabina.
Corte a dos meses despué s. Estamos en el mismo tipo de avió n, por lo
que Johnny tiene en mente que está bien que fume, pero es un piloto
diferente quien, con razó n, no lo está . Rotten se vuelve absolutamente
balı́stico. Es como un jodido bebé que tiene una rabieta: golpea la puerta
del piloto, intenta abrir las ventanas y las puertas del fuselaje,
bá sicamente arriesgando todas nuestras vidas porque alguien le ha
dicho que tiene que esperar un par de horas para fumar un cigarrillo.
Son las dos de la mañ ana, todos estamos hechos polvo y todos intentan
darse cuenta de que está n bromeando, pero nadie lo está , porque un
hombre de unos cincuenta añ os se ha derrumbado por no salirse con la
suya.
Sé a dó nde ı́bamos, de Noruega a Irlanda, y como era un avió n tan
pequeñ o, tuvo que detenerse en el camino para repostar. Cuando
aterrizamos pensé : 'Bueno, eso es todo, está herido'. Pero no pasó nada:
no vino ningú n policı́a a llevá rselo, se quedó fumando al lado del avió n
mientras repostaban y volvı́amos a partir. Creo que lo que má s odio de
estas situaciones es que no puedo ser yo misma con é l. Con cualquier
otra persona, podrı́as simplemente decirles que metan la cabeza, pero
debido a que en los ú ltimos añ os se ha rodeado de personas que no solo
toleran su infantilismo y agresió n, sino que lo alientan activamente,
cualquiera que se atreva a pinchar esa burbuja lo hará . solo estar
haciendo la vida insoportable para todos los demá s. Ası́ que tienes que
aceptarlo: sı́, John, no, John, tres bolsas llenas, John.
Lo divertido fue que, muy al principio de la gira, hicimos un show de
calentamiento en Austria antes de tocar en el Festival de la Isla de Wight
al dı́a siguiente. Rotten decidió de la nada que iba a cambiar la lista de
canciones, é l y Cookie se involucraron, y las cosas se pusieron realmente
feas de inmediato. Este fue el segundo show de la gira y tenı́amos treinta
y dos má s por hacer. En ese momento, estuve seriamente tentado a irme
a la mierda. Me preguntaba si podrı́a salirme de la gira ingiendo
romperme la espalda en el escenario de la Isla de Wight. De hecho, hablé
con un par de personas sobre có mo ingir una lesió n en la columna de
una manera que pareciera legı́tima. Supongo que hubo algunos
futbolistas de la Premiership que podrı́an haberme ayudado con eso.
Sé que hubiera decepcionado a los faná ticos que querı́an vernos, pero
todo lo que pude ver fue los pró ximos meses extendié ndose frente a mı́
con la necesidad de Johnny de controlar todo lo que se estaba
enconando a travé s de ellos. yo estaba en el in ierno Por supuesto,
cuando se trataba de la (falsa) crisis, no podı́a seguir adelante. Y me
alegro de no haberlo hecho, porque a pesar de que mi predicció n de
có mo resultarı́a la gira resultó má s o menos precisa, el show de
Hammersmith Apollo justo al inal valió la pena... bueno, tal vez no todo
el dolor, pero ciertamente la mayorı́a de eso
Me encantaba tocar en ese concierto, porque tenı́a mucha historia
atada en el lugar. Fue extrañ o, cuando piensas en todas las veces que
habı́a estado allı́ para ver a Bowie y Mott the Hoople (y para robar los
ampli icadores de Bowie). Pero ya no era el niñ o que acechaba en las
vigas como el fantasma del Odeon; ahora estaba en el escenario, de pie
en el mismo lugar donde habı́a estado Ariel Bender. Era extrañ o caminar
por todos los pasillos y camerinos. En realidad, no habı́an cambiado en
los treinta añ os transcurridos desde que solı́a irrumpir por la parte de
atrá s; son pequeñ os cuartos bastante clı́nicos, realmente no hay magia
en ellos. Pero, en general, fue un momento bastante bueno, haber
cerrado el cı́rculo y estar de vuelta sobrio, tocando nuestras canciones
para una multitud que realmente querı́a escucharlas.
Sin embargo, siempre es difı́cil asimilar el signi icado de estas cosas
cuando está n sucediendo, y eso me desconcertó un poco. Fue la noche
antes de mi cumpleañ os y Rotten volvió a hacer la rutina de 'Feliz
cumpleañ os' con la multitud, lo que me conmovió . Eso realmente se
sumó a lo especial que era. Recuerdo tocar 'No Feelings' y Cookie salió
mal y todo fue un desastre, tal vez porque en realidad habı́a algunos
jodidos sentimientos involucrados. Y despué s del concierto, me sentı́
satisfecho. Cookie y yo incluso fuimos y pasamos un rato en este pub en
la calle de é l, que era el local de su padre.
Habrı́a sido la manera perfecta de terminar la gira. El espectá culo fue
una ceguera: signi icó algo para mı́, y me hubiera encantado haberlo
golpeado en la cabeza en ese momento y relajarme.
Desafortunadamente, tenı́amos un concierto má s de poxy que hacer
unos dı́as despué s en esa parte de Españ a donde no quieren que los
llamen españ oles. Mi inal de cuento de hadas habı́a sido jodido por los
vascos... ¡y despué s de todo lo que habı́a hecho por ellos!
30. LOS CHICOS SIGUEN GIRANDO
Mucha gente en bandas encuentra difı́cil adaptarse cuando regresan de
una gira larga como la que hicimos en el verano de 2008. Y ademá s de la
dislocació n habitual, nos esperaba una sorpresa inanciera
desagradable. Se suponı́a que ı́bamos a ganar mucho dinero con ese
perı́odo de tres meses: habı́a estado alquilando un lugar en Hyde Park
en Knightsbridge y viviendo a lo grande todo el verano con esa
expectativa. Desafortunadamente, resultó que la olla de oro al inal del
arcoı́ris estaba llena de mierda.
Entre el primero de esos programas y el ú ltimo, las principales
economı́as del mundo se volvieron locas, ası́ que lo que pensá bamos que
ı́bamos a conseguir era muy diferente de lo que realmente hicimos. Los
banqueros nos lo habı́an jodido todo; resultó que las ú nicas notas que
realmente importaban eran las que venı́an en fajos. ¡Habla sobre la
venganza de los trajes! Por suerte para mı́, tenı́a un trabajo al que volver
a casa.
Está bien, poner discos en la radio durante un par de horas cada dı́a
puede no ser la idea de trabajo duro de todos, pero es lo má s cerca que
he estado de un horario normal de nueve a cinco. En ese momento,
cualquier cosa que hubiera estado haciendo que no involucrara a Rotten
habrı́a sido una alegrı́a. Enfrentado a la elecció n de regresar a la
carretera con los Pistols o ser ahorcado en Tyburn con una multitud
arrojá ndome coles, habrı́a ido por las coles cada vez. Entonces, el hecho
de que pude hacer algo que realmente disfruté y de alguna manera tener
é xito fue solo una ventaja.
Fue una de esas casualidades extrañ as, có mo se unió el Jukebox de
Jonesy . Debido a que la estació n en la que comenzó , Indie 103.1FM,
acababa de salir al aire y estaban tratando de hacer algo un poco
diferente, nos dieron una cantidad inusual de libertad. Comenzaron a
transmitir en la Navidad de 2003, y los sintonizaba como apostador en
el automó vil y me encantaba el hecho de que tocaban cosas como
Buzzcocks e incluso los Sex Pistols, que nunca escucharı́as en la radio en
ese momento ( o ahora, en realidad, fuera de mi programa), porque por
alguna razó n no cali icamos como rock clá sico. Despué s de eso, solo un
par de semanas despué s, recibı́ una llamada preguntá ndome si me
gustarı́a hacer un programa para ellos. Mientras tanto, no habı́a habido
ningú n contacto entre nosotros, ası́ que supongo que todo estaba
destinado a suceder.
Al principio, era una broma total. No tenı́a ni idea de qué decir ni idea
de lo que se suponı́a que debı́a hacer. Supongo que habı́a un cierto
encanto en un hombre que intentaba mantenerse a lote en un balde
agujereado en las ondas de radio sú per resbaladizas de Los Angeles.
Creo que parte de la atracció n de la gente era escuchar a este bufó n en la
radio que se tiraba pedos y eructaba y dejaba largos interludios de
silencio mientras tocaba la mú sica que querı́a. Me tomó un poco de
tiempo ponerme en marcha y decidir có mo querı́a presentarlo todo,
pero desde el principio hubo mucha buena voluntad en mi camino.
Conocı́ a David Bowie por primera vez en un concierto que dio en Los
Angeles la noche antes de mi primer show y le dije que iba a tocar
muchos de sus discos en la radio. El respondió : 'Bien, porque nadie má s
lo hace', o palabras por el estilo. Entonces, obviamente, no fui solo yo
quien sintió que los pará metros de la radio del sur de California eran
demasiado estrechos. A pesar de que la estació n tenı́a una señ al
pequeñ a, a las personas que se preocupaban por la mú sica les
encantaba, y no me llevó mucho tiempo adaptarme a hablar en vivo al
aire. Supongo que levantarme para hablar en las reuniones de 12 pasos
me habı́a dado un buen entrenamiento para hacer confesiones
completas en pú blico y có mo crear el tipo de atmó sfera que saca lo
mejor de las personas.
Nunca quise ser uno de esos DJs que deliberadamente se propusieron
incomodar a sus invitados. Puede que a veces diga cosas impactantes,
pero soy lo opuesto a un deportista impactante. Obtienes mucho má s de
las personas si está n relajadas. Debido a que saben que no solo
pretendes hacerlos parecer estú pidos, es mucho má s probable que bajen
la guardia y digan algo interesante en lugar de simplemente entrar en su
rutina promocional habitual. Ademá s, desde un punto de vista personal,
es bueno para mı́ poder devolverles algo a las bandas a las que les he
robado cosas, ası́ como a los oyentes.
Nadie má s está tocando 'Virginia Plain' en la radio diurna en Los
Angeles en estos dı́as, eso es seguro. Tal vez casi lo he tocado lo
su iciente como para pagarle a Roxy Music por ese a inador de guitarra
que les robé . Ha habido tantas ocasiones en las que la mú sica me ha
llegado al azar y ha mejorado mi vida, desde escuchar a Jimi Hendrix
desde la ventana de Shepherd's Bush en adelante, que me encanta la
idea de hacer eso por otras personas. Y el hecho de que pueda conocer y
tocar con muchos de mis hé roes es solo el glaseado del pastel.
Una vez que comencé a construir una reputació n por hacer algo un
poco especial, conseguı́ que entraran todo tipo de personas importantes.
Burt Bacharach era realmente bueno, y Sly Stone estaba totalmente loco,
lo que sin duda agregó una dimensió n adicional a nosotros tocando
juntos. Robert Plant tambié n estuvo genial. Pude tocar con é l tambié n, y
me puso en contacto con alguien con quien nunca antes habı́a estado a
la altura y que, segú n é l, era uno de sus favoritos. Era un tipo de los añ os
cincuenta llamado Ral Donner que sonaba un poco como Elvis, y ahora
me gusta mucho su material. Si vuelves a escuchar algunas de las viejas
melodı́as de Zeppelin justo despué s de Ral, puedes escuchar que Planty
le cortó algunos de sus lametones.
Inevitablemente, habı́a alguna que otra manzana podrida en el barril.
Brian Wilson era un completo capullo. Solo porque supuestamente está
un poco loco, no es una maldita excusa para no ser una buena persona. A
Jerry Lee Lewis tampoco le fue muy bien. Obviamente, es conocido como
un cliente complicado, pero tengo un respeto total por su mú sica, me
encanta toda su mierda inicial. Desafortunadamente cometı́ el error de
abrir una lata de gusanos al preguntarle có mo fue cuando vino a
Inglaterra (con esa prima de trece añ os con la que estaba casado). Se
volvió un poco hacia mı́, pero por suerte no estaba armado.
Aunque uno de los puntos de venta del programa es que siempre diré
lo que tengo en mente, no soy un completo idiota cuando se trata de
cosas que debo y no debo decir. Una de las ú nicas veces que recibı́ un
golpe en la muñ eca fue por insistir sobre esa ma ia Xenu, los
cienció logos, y decir que su Dios que vive en otro planeta era un gran
herpes. Me llamaron a la o icina por eso y me dijeron: 'Mira, golpé alo en
la cabeza'. Hay mucha gente en Hollywood a la que le gusta eso y no
queremos perder patrocinadores. Ası́ que eso fue un no-no. Aú n ası́, me
sentı́ bastante reivindicado recientemente cuando vi ese documental
sobre ellos, Going Clear . Eso fue graciosı́simo.
Lo que má s me enorgullecı́a de Jonesy's Jukebox era que era algo mı́o:
se mantenı́a o caı́a segú n mi contribució n, por lo que realmente podı́a
disfrutar de su é xito porque sentı́a que me lo habı́a ganado. Eso fue muy
importante para mı́ y me dio mucha autoestima. Rotten incluso apareció
una vez y fue positivo, educado y respetó el hecho de que era mi
programa, no el suyo. Eso fue un hito para mı́, aunque fue estresante
tenerlo allı́.
Lo de ser DJ fue otro ejemplo del programa de 12 pasos que me guió
por un buen camino. Me dio má s con ianza de que si me dejo llevar por
mis instintos, sucederá una mierda creativa, y no necesito dudar de mı́
mismo ni menospreciarme tanto. Eso es lo má s grande que he aprendido
en sobriedad: dejar que las situaciones se desarrollen. Preocuparme por
cada pequeñ o detalle siempre me resultó contraproducente, donde estar
má s relajado me ayudó a ser má s profesional para poder disfrutar
realmente de no defraudar a la gente. Cinco dı́as a la semana durante
cinco añ os es el tiempo má s largo que he hecho una cosa, y
probablemente me hubiera quedado mucho má s tiempo si la estació n no
se hubiera cerrado.
Ese fue un dı́a triste, a principios de 2009, unos cuatro meses
despué s de regresar de la gira. Despué s me sentı́ mal porque sabı́a que
el juego habı́a terminado, pero nadie le habı́a dicho a Lemmy, quien iba a
ser mi invitado ese dı́a, ası́ que apareció en el estudio con su Jack and
Coke en la mano y descubrió que no habı́a estació n para é l para aparecer
en. Serı́a aú n má s triste ver a Lem por ú ltima vez en su iesta de
cumpleañ os nú mero 70, justo antes de que muriera a ines de 2015.
Habı́amos tenido algunas buenas charlas durante los cuarenta añ os que
lo conocı́a, pero era casi como si é l no habı́a má s al inal. Toda esta gente
se habı́a presentado para la celebració n, pero é l realmente no sabı́a
quié nes eran.
Grim Reaper ha estado haciendo horas extras en los ú ltimos añ os.
Cuando Malcolm McLaren murió en 2010, eso fue muy importante para
mı́. Tuvieron un servicio conmemorativo para é l y le envié una carta a su
hijo Joe, con quien solı́a compartir el dormitorio, diciendo: '¿Dó nde está
el dinero? Quiero mirar en el ataú d porque ahı́ es donde probablemente
esté la masa. Obtuvo una gran risa de todos los apostadores cuando
aparentemente lo leyó , pero no me estaba burlando de nada. Creo que a
Malcolm le hubiera gustado, porque de todos modos siempre pre irió el
mito a la realidad, y continué diciendo el gran impacto que habı́a tenido
en mi vida.
Lo ú nico que todos los humanos tienen en comú n es que nadie sabe
realmente qué sucede cuando mueres. Todo el mundo tiene su teorı́a,
pero pienses lo que pienses, no lo sabes, toda esa mierda de estar en la
losa y caminar hacia la luz, eso es solo una cosa quı́mica que se dispara
en tu cabeza. Como resultado, la parte del 'poder superior' del programa
de 12 pasos es algo con lo que mucha gente tiene problemas. Sé que lo
hice, al menos hasta que me di cuenta de que no tiene por qué signi icar
creer en un tipo que parece Papá Noel en una nube, se trata solo de
darme cuenta de que sea lo que sea Dios, no eres tú . Si no recibes el
mensaje de que tu voluntad egoı́sta no es el centro del universo, nunca
logrará s resolver nada.
Dicho esto, uno de los dichos má s paté ticos que se repiten en las
reuniones es 'Dios no te trajo tan lejos para derribarte'. ¡Dı́selo al viejo
que acaba de contraer el SIDA y murió de cá ncer! Cuando me pregunto
por qué sigo aquı́ cuando probablemente no deberı́a estar mientras
mucha gente que no merecı́a morir se fue hace mucho tiempo, la mejor
respuesta que se me ocurre es entender que todo está má s allá mi
comprension O, para decirlo un poco má s simple, 'La mierda pasa,
gente'. Estoy seguro de que esos pobres hijos de puta que estaban en el
avió n que se estrelló contra el World Trade Center no habı́an hecho nada
malo. Personalmente, no puedo imaginarme a un viejo barbudo de
arriba eligiendo quié n va y quié n no: 'Está bien... No, que se joda, es un
cabró n', pero si puedes, entonces noqueate.
Ahora estoy de vuelta en la radio cinco dı́as a la semana otra vez,
parece ser RIP alguien u otro má s o menos todos los dı́as. No me
importa todo el alboroto cuando se trata de Lemmy o David Bowie. Lo
que no me gusta es cuando muere alguien que ha estado en una larga
cuesta abajo, y luego todo el mundo se compadece y sentimentaliza su
adicció n. Como mi viejo compañ ero Scott Weiland de Stone Temple
Pilots, con quien solı́a tocar 'Bodies'. Fui a un par de reuniones con é l,
pero simplemente no lo entendió y nunca lo harı́a. Esa es la realidad. Lo
má s importante para mı́ fue que a nadie le importaba una mierda el dı́a
anterior, pero tan pronto como murió , todas las estaciones de radio de
Los Angeles lo exprimieron.
Supongo que en cierto modo esa es la belleza de la vida: no sabes lo
que viene, y justo cuando crees que lo has descubierto, algo sucede que
pone todo patas arriba. Cuando me mudé a Los Angeles por primera vez
y a nadie le importaba una mierda el punk, no sabı́a que Axl y Kurt
Cobain amaban a los Sex Pistols y que volvı́amos a estar juntos iba a
hacer que todo volviera a ser un gran problema dentro de diez añ os. . Me
habrı́a sorprendido aú n má s saber que iba a ser aú n má s grande otros
veinte añ os despué s. En estos dı́as, todos los niñ os parecen tener la
camiseta con la imagen de Sid; ya ni siquiera es una moda pasajera, se ha
convertido en parte de la cultura. Parece que el punk no desaparecerá
ahora, pero no hay forma de saberlo.
Al momento de escribir, todo el asunto de los Pistols es un poco
complicado. Deberı́amos estar operando una má quina ajustada y
descubriendo formas de hacer masa, pero eso no es realmente lo que
está sucediendo. Nos siguen ofreciendo espectá culos, pero no estoy
seguro de si la dosis será su iciente para que volvamos a estar juntos. La
gente dice, 'Bueno, los Rolling Stones todavı́a lo está n haciendo...' pero
no creo que lo hagan, con nuestro dinero. Ademá s, su negocio no tiene
que ser manejado de tal manera que mantenga felices a dos imbé ciles
imaginarios en una propiedad del este de Londres. Entiendo que es
bueno ser auté ntico cuando tienes veinte añ os, pero cuando te haces
mayor, las cosas cambian. De todos modos, los dos capullos imaginarios
probablemente ya hayan vendido su piso de protecció n o icial y se hayan
ido a la mierda a Essex.
No me malinterpreten, no digo que debamos hacer anuncios de
hipotecas. Tienes que mantener vivo el sueñ o hasta cierto punto. Ese fue
uno de los mejores momentos de Johnny, cuando nos pusieron en el
Saló n de la Fama del Rock & Roll en 2006 y les envió una carta en el
ú ltimo minuto negá ndose a presentarse y llamando a toda la ceremonia
'orina en vino'. Dejado a nuestra suerte, el resto de nosotros
probablemente hubié ramos hecho el espectá culo, pero a la larga lo que
hizo fue lo mejor para los Pistols como idea. Aunque a Anita le hubiera
gustado má s de 24 horas de antelació n.
Esa es la parte difı́cil con John. Si fuera un idiota total todo el tiempo,
podrı́as descartarlo, pero de vez en cuando hace algo por lo que debes
elogiarlo solo para mantenernos alerta. La vergü enza es que no necesita
ser tan inseguro. Nadie cuestiona la contribució n de John a la banda.
Todo el mundo sabe que fue uno de los mejores cantantes de todos los
tiempos, que puso lo que é ramos en palabras, una actitud y un estilo
vocal. Pero aun ası́, é l no es el que tiene que aparecer en la inauguració n
del nuevo casino Hard Rock en Las Vegas para ver una de sus citas en
boca de otra persona. (Habı́an escrito: 'Las ú nicas notas que importan
son las que vienen en fajos', en la pared, que todos saben que era una
mı́a, y se la atribuyeron a 'Johnny Rotten').
De todos modos, todo es tan irrelevante cuando piensas en el jodido
tamañ o in inito del universo. Aquı́ estamos, estas diminutas hormigas,
hablando engreı́damente sobre por qué Wally obtuvo el saco de
Swankers, pero cuando las hormigas entran en mi casa, saco el spray y
asesiné a unas 20,000 de ellas. Soy como el Himmler de las hormigas. En
su mundo, probablemente esté n discutiendo sobre quié n no ha hecho
sus tareas de hormigas, luego llego y presiono un botó n y se van. Este es
justo el tipo de material inspirador que desea leer en un ú ltimo capı́tulo,
¿no es ası́? No creo en las cosas cubiertas de azú car.
Incluso ahora que he estado sobrio veinticinco añ os, todavı́a me
despierto un poco miserable la mayor parte del tiempo, pero no creo
que alguna vez pienses, 'Todo va a estar bien de ahora en adelante,
porque yo 'He descubierto el verdadero signi icado de mı́.' Estoy feliz de
no estar cargado. Con ese in, doy muchas charlas y tambié n patrocino a
un par de personas má s, de las que saco mucho provecho. Ademá s, sigo
yendo a cuatro o cinco reuniones a la semana. Llego temprano y luego
agradezco al orador. Gary Holton estarı́a orgulloso de mı́.
He hecho bastantes reparaciones en los ú ltimos añ os: tienes que
hacer los 12 pasos en orden y ese es el noveno. Es posible que la persona
a la que has hecho mal no acepte tus disculpas, pero si solo quiere
decirte que te vayas a la mierda, obviamente esa es su elecció n; se trata
de limpiar tu lado de la carretera.
Mi gran cosa fue: 'Oh, mierda, ¿tendré que devolverle el dinero a la
gente por todas las cosas que robé ? Porque si es ası́, voy a estar pagando
a estos cabrones por el resto de mi vida. Afortunadamente, nadie ha
pedido el dinero todavı́a. El tipo de 10cc fue un buen ejemplo de có mo
responde la gente normalmente. Conseguı́ su nú mero y lo llamé para
decirle: 'Mira, lo siento, pero le robé una de tus guitarras. ¿Qué puedo
hacer para arreglarlo?' Simplemente dijo: '¿Sabes qué ? No te preocupes
por eso. Agradezco la disculpa. Y cuando fui a dormir esa noche, bajé la
cabeza sintié ndome un poco má s como una maldita persona decente
que habı́a limpiado un poco de los escombros de mi pasado.
Obviamente, las cosas podrı́an ser un poco má s enconadas con Ariel
Bender, pero crucemos los dedos, ¿eh? Tal vez deberı́a tenerlo en el
programa...
Tambié n hago un poco de meditació n, en estos dı́as, para ayudarme a
concentrarme. Russell Brand me introdujo en la Meditació n
Trascendental cuando yo era la orquesta de un solo hombre en su
programa de televisió n por un tiempo. Está s destinado a hacerlo solo
durante veinte minutos, mañ ana y tarde, pero no siempre puedo
hacerlo. Voy a la meditació n en grupo los mié rcoles y domingos por la
noche, lo que me parece mucho mejor, porque cuando hay un montó n de
gente, parece que obtengo má s energı́a del grupo para poder
profundizar un poco má s en todo.
Me gusta la MT porque es una de las formas má s simples de
meditació n. No soy muy bueno contando cuentas y todo eso. Con TM
simplemente te sientas ahı́ y dejas que suceda; di tu mantra de vez en
cuando; no es di icil. Sales sintié ndote mucho má s tranquilo. Por
supuesto, podrı́a ir al Instituto David Lynch a meditar y luego algú n
capullo me cortarı́a en pedazos en el camino de regreso a casa y
simplemente comenzarı́a a gritarle: el tipo de Terciopelo Azul con la
má scara en la cara todavı́a lo hará . salga. No estoy caminando sobre una
maldita nube como la gente piensa, pero supongo que eso es lo mismo
para todos. No derribes la pinta del maharishi o te atrapará .
El principal bene icio de la MT para mı́ es que me hace un poco má s
consciente de la mierda que está pasando; Puedo ser un poco
inconsciente, abandonado a mis propios dispositivos. A medida que
envejezco, es importante para mı́ tratar de ser má s amable con otras
personas. No ser un capullo, ahı́ es donde está mi cabeza. Todavı́a tengo
a Steve egoı́sta y consumista dentro de mı́, pero a medida que envejezco,
parece que me he vuelto un poco má s considerado con los demá s: mis
jodidos compañ eros humanos, si quieres digni icarlos con ese tı́tulo. No
estoy seguro de si eso cuenta como tomar un camino má s espiritual,
pero es lo má s cerca que voy a estar de uno.
Mis impulsos adictivos todavı́a aparecen de la nada de maneras
inesperadas, como hace unos añ os cuando tuve que someterme a una
cirugı́a de espalda por hacer demasiados giros. Es un entrenamiento que
hacen en Los Angeles. No es algo que necesariamente querrı́as que la
gente supiera que te enganchaste, pero me importa un carajo. Ahora es
demasiado tarde para esconder algo. Bá sicamente, el spinning es
aeró bicos en bicicleta. La forma en que funciona es que tienes un grupo
de personas en bicicletas estacionarias, pedaleando muy rá pido (no es el
tipo de pedaleo del que suelo hablar) y mirando a un instructor que les
dice qué hacer. Ella dice que te levantes del asiento y te paras sobre los
pedales, te bajas y vuelves a bajar. Por lo general, tambié n hay mú sica a
todo volumen, no del tipo que normalmente escucharı́a.
De todos modos, me obsesioné tanto con todo este proceso que lo
hice seis dı́as a la semana durante un maldito añ o. Incluso llegué al
punto en que yo era el tipo en el podio y todos me miraban en busca de
una ventaja. Mira, mamá , la cima del mundo.
Debo decir que no culpo a la gente por reı́rse cuando se enteran de
esto. Veo que es divertido, y lo que lo hizo aú n má s divertido fue que,
obviamente, nunca solı́a hacer estiramientos o calentamientos de
ninguna manera. Hasta que un dı́a de repente me di cuenta: 'Oh, mierda,
me he jodido la espalda'. A partir de entonces, pasé por un in ierno
durante dos añ os. Querı́a evitar la cirugı́a, ası́ que acudı́ a todos los
charlatanes de la ciudad, que en Los Angeles son bastantes charlatanes.
Todos los capullos que iban a arreglarlo recibieron mis dó lares, y fue
solo una pé rdida de tiempo. Lo que sufrı́a era bá sicamente ciá tica: cada
vez que haces la transició n de sentarte a pararte, llegas a un punto en el
que sientes que te está n apuñ alando.
El dolor era tan fuerte que terminé quedá ndome en casa. Querı́a
evitar tomar analgé sicos por motivos de sobriedad, ası́ que probé todo
lo demá s en su lugar: esteroides, acupuntura, quiroprá cticos, osteó patas,
esa energı́a, lo hice todo. Desafortunadamente, el problema era
demasiado serio para solucionarlo con abracadabras, ası́ que terminé
teniendo que ponerme la epidural todo el tiempo. Mi cara estaba
horriblemente hinchada por todos los esteroides que me pusieron y
inalmente tuve esta cosa llamada nucleoplastia: una incisió n con calor
en el extremo que usan para quemar el borde de las vé rtebras. Lo ideal
serı́a que no hubiera cicatriz, pero desafortunadamente mi recuperació n
de la operació n salió mal, ası́ que cada vez que caminaba a algú n lado
era como si me estuvieran dando descargas elé ctricas en las bolas. Esto
continuó , hasta un nivel en el que me desplomaba al azar en la calle,
durante un par de meses má s antes de que inalmente se aclarara. Si
hubiera sabido lo que iba a pasar, nunca me hubiera involucrado con el
hilado en un milló n de añ os, pero vives y aprendes. Todo el mundo tiene
algú n tipo de mierda que les sucede.
Mi madre y yo nunca habı́amos sido cercanas, pero ese ú ltimo viaje a
Londres fue má s o menos la gota que colmó el vaso en lo que a nosotros
dos concernı́a. Cuando se enteró de que iba a visitar a mi verdadero
padre, se sintió como una espina clavada en el costado, pero casi lo
superamos. Luego apareció en una de las grabaciones de mi programa
de radio que estaba haciendo en Londres y fue jodidamente gracioso: se
parecı́a un poco a Alvin Stardust cuando apareció , en el sentido de que
no entendió bien el concepto de lo que estaba pasando. en vivo en Los
Angeles mientras lo hacı́amos. Fue tal el é xito que ı́bamos a hacerlo de
nuevo el dı́a de mi cumpleañ os, el dı́a despué s del show de
Hammersmith, pero ella no apareció . Simplemente desapareció , no
respondı́a ninguna llamada, era como si hubiera desaparecido.
Cuando inalmente me puse en contacto un dı́a despué s, ella dijo que
se habı́a olvidado, pero que eso realmente no encajarı́a, porque
habı́amos enviado un automó vil y todo. Despué s de interrogarla un
poco, resultó que tenı́a problemas porque no la habı́an invitado al
concierto. No la habı́a invitado deliberadamente, simplemente nunca se
me ocurrió que era algo que ella querrı́a hacer. Pensé que serı́a
demasiado loco para alguien de su edad. De todos modos, las cosas se
calentaron un poco por telé fono, y no hemos vuelto a hablar desde
entonces. Me doy cuenta de que este es el tipo de malentendido que
probablemente podrı́a aclararse bastante rá pido en una relació n normal
de madre e hijo, pero supongo que cosechas lo que siembras.
Casi he renunciado a la idea de tener una relació n normal con una
mujer. Llegaré a una etapa en la que realmente me empezará a gustar
alguien, y luego ya no podré tener sexo con esa persona. Eso es má s o
menos el tamañ o de la misma, y es un obstá culo que no puedo superar.
He estado en Sex Anonymous y he hecho mucha terapia, pero ahora he
dejado. No estoy menospreciando esas experiencias: han ayudado, pero
una vez que te das cuenta de que todo es el mismo impulso: drogas,
alcohol, cigarrillos, sexo, pasteles; el agua siempre encontrará su propio
nivel, simplemente no hay otro lugar adonde ir. Tomé la decisió n
consciente de dejar de hacer cosas que me avergonzarı́an, y me siento
mucho mejor por ello.
No me malinterpreten, no soy un monje. Todavı́a actú o de varias
maneras con los pá jaros que se pasean por las reuniones. Estoy seguro
de que todos chismean sobre mı́, 'Aquı́ viene, ¿de quié n se va a aferrar
ahora?' Pero lo reconozco, porque eso es lo que soy: un desviado sexual
semi-retirado que en realidad ya no actú a tanto, pero aú n tiene esos
impulsos de vez en cuando. He hecho má s cosas perversas estando
sobrio que cuando estaba bebiendo y usando. Entonces no tienes la
energı́a.
En general, estoy bien siendo soltero y recibiendo algunos pá jaros de
vez en cuando, pero tambié n hay un lado frı́o y solitario. Casi puedo
arreglá rmelas para cuidar de un perro en estos dı́as. Tuve un gran
boxeador llamado Winston durante unos seis añ os. Fue divertido có mo
lo conseguı́. Un pá jaro que conocı́a lo tuvo primero. Solı́a ir a verla los
ines de semana y me relacioné mucho con Winston. Luego encontró a
otro tipo que tenı́a un rottweiler. El rottweiler y el boxeador no se
llevaban bien, ası́ que me dio el perro. La idea de asumirlo me asustó al
principio: 'Voy a tener este perro ahora, este va a ser mi perro todo el
tiempo' me pareció una gran responsabilidad, pero en realidad lo
manejé bien, y fue muy bien hasta que tuvo un tumor cerebral y murió
cuando tenı́a unos diez añ os. Parecen bastante abundantes en esa raza,
los viejos tumores.
Estaba triste cuando Winston murió , pero toda la experiencia fue
de initivamente un paso adelante de los dos bulldogs que tuve por un
tiempo cuando estaba sobrio. No sabı́a lo que estaba haciendo en ese
momento, ası́ que realmente no deberı́a haberlos conseguido, pero
supongo que estaba tratando de darme algo má s en lo que
concentrarme. Eran hermanos y mi pensamiento fue: 'Conseguiré dos y
se pueden hacer compañ ı́a'. Pero fue una maldita pesadilla: me volvieron
loco porque no se podı́an entrenar. Aguanté nueve meses, tal vez un añ o,
hasta que los llevé a la casa de este pá jaro. Ella tenı́a un pequeñ o caniche
y lo masticaron en pedazos. Fue entonces cuando supe que no podı́a con
ellos, ası́ que se los llevé a los criadores.
Sin embargo, nunca se sabe hasta que no se intenta, ¿verdad? Tengo
que probar cosas nuevas de vez en cuando, porque lo má s importante
para mı́ es no sentirme demasiado có modo y complaciente. Dejado a mis
propios dispositivos, probablemente me quedarı́a solo en casa, viendo
televisió n, comiendo pasteles de crema y masturbá ndome, ¡viviendo el
sueñ o! Tengo una aplicació n llamada WaterMinder en mi telé fono que
me recuerda levantarme y tomar un trago de agua de vez en cuando,
para no morirme de sed. Pero estar en ese lugar solitario no es bueno
para mı́, y si lo hago por mucho tiempo, lo má s probable es que termine
dá ndome la lata y recayendo.
Ası́ empezaron los Instagram, cuando no estaba haciendo nada y me
di cuenta de que necesitaba una vı́a de escape para algú n tipo de
creatividad. Actué un poco en el programa de televisió n Californication y
realmente lo disfruté . Eso vino de una llamada telefó nica del hombre
que lo creó , Tom Kapinos, y estuve en é l durante dos temporadas. Actuar
es divertido y me encantan los entresijos de todo el asunto. Aprendı́
mucho pero, por supuesto, sabiendo que no soy un profesional, habı́an
escrito un personaje de gerente de gira que era bá sicamente yo. No iban
a tenerme interpretando a un sacerdote. De hecho, le pregunté a Tom:
'¿Alguna vez has tenido una escena en la que le lamen el culo a alguien,
el viejo lanzamiento de la ensalada?' Dijo que no, ası́ que les pedı́ que
escribieran eso en é l, y fue bastante divertido. En cierto modo, me
gustarı́a hacer má s de ese tipo de trabajo, y probablemente podrı́a
hacerlo si no fuera tan perezoso.
Lo que me encanta de Instagram es que puedo hacerlo todo yo
mismo, ası́ que si alguien se va a equivocar, seré yo. Tengo todas las
cosas en casa: me compré un equipo liviano y puse la cá mara del iPhone
en un soporte de ibra de carbono y luego elegı́ los mejores sesenta
segundos. Luego uso una aplicació n para poner la mú sica, que es como
hacer sobregrabaciones en el estudio. Tengo una colecció n bastante
buena de sombreros y pelucas, ya veces me pongo una de las má scaras
de diablo que me hace este chico gay que trabaja en una marroquinerı́a.
Pero si necesito un disfraz especial, como el maquillaje azul para el
video de Dave Bobbins, buscaré a alguien que me ayude. Es divertido y
hace reı́r a la gente; y ademá s, esta es la maldita era de la informació n, y
si no está s en Twitter o Instagram, te vas a quedar atrá s.
Es difı́cil encontrar el tiempo para hacer Instagram en este momento,
porque desde que he estado haciendo este libro y luego KLOS volvió a
comprar Jonesy's Jukebox , en realidad he estado bastante ocupado, por
lo que me siento mejor. Cuando el programa se emitió por primera vez
en Indie 103.1, literalmente podı́a tocar lo que quisiera: reggae, Norman
Wisdom, cualquier cosa. Pero ahora estoy en KLOS, una estació n mucho
má s grande con quizá s dos o tres millones de oyentes, tenemos que
mantenerlo en el vago estadio del rock. Pensé que iba a ser un verdadero
desafı́o cinco dı́as a la semana, pero está funcionando bien por ahora.
Por suerte, me dan mucho margen para colarme un poco de Strawbs o
Atomic Rooster aquı́ y allá ; Tengo que cambiarlo un poco, de lo
contrario, ¿cuá l es el punto de tenerme allı́?
Es esencialmente el mismo programa que cuando comenzó : solo mis
tonos bajos y dulces con algo de rock 'n' roll. Entonces, en un dı́a
promedio en este momento, tal vez me levante temprano para ver un
partido de Chelsea en la televisió n, o ir a caminar por los cañ ones con
Billy Duffy y Slim Jim Phantom, el baterista de los Stray Cats, y su perro
el Gran Bandini. Luego iré al centro en mi moto para recoger algunas
camisetas de muestra de Jonesy's Jukebox , antes de hacer el espectáculo a
las doce campanadas. Despué s de eso, podrı́a ir y hacerme algunas fotos
nuevas. Oh sı́, es todo ir aquı́. Esto es Hollywood, cariñ o.

É
APÉNDICE – COSAS QUE NO SON ROCK 'N'
ROLL
He decidido publicar esta lista de prohibiciones del rock 'n' roll como un
servicio pú blico. No soy un hipó crita. Sé que he tenido algú n que otro
desliz en un par de estas á reas, pero las reglas está n hechas para
romperse. ¿Y có mo vamos a crecer como personas si no nos ijamos
está ndares increı́blemente altos?

Cosas que no son rock 'n' roll:

Calvicie
papada
Perspex alrededor de la baterı́a
Tambores electricos
Monitores de oı́do/tapones para los oı́dos/tapones para el cabello
Guitarras Steinberger (las pequeñ as negras que no tienen clavijero)
publicistas
linnbateria
Haga clic en pistas
Pablo Shafer
El Saló n de la Fama del Rock & Roll
Blancos con rastas
Estiramiento facial en viejos
Viejos tratando de parecer jó venes
Los blancos tratando de ser geniales
Gente blanca tratando de bailar
Espectá culos bené icos
Conoce y saluda (pero saludar a la carne está bien)
Sandalias
Autofotos
Comida saludable
Nunca haber tenido VD
ser viejo
Teñ ir tus canas de negro
Laminados All Access
Coñ os colgando a ambos lados del escenario
Cabrones que dicen que te vieron hace cuarenta añ os, pero en ese
entonces te odiaban en secreto
Imbé ciles que obtienen su irma en cosas y luego las venden en eBay
AGRADECIMIENTOS
Steve Jones gracias:
No voy a agradecer a todos los que me conocen, esto no es el Oscar, pero
me gustarı́a decir algo sobre Dawn Girocco. Ella es la gerente general de
la estació n de radio y Jonesy's Jukebox no estarı́a en KLOS sin ella. Sin
embargo, no es solo eso. Dawn retrocede hasta el comienzo del
programa en Indie 103.1 y luego avanza a travé s de KROQ. Digamos que
ha sido una defensora acé rrima que marcó la diferencia.
Otras personas a las que agradezco por ayudarme a hacer realidad
este libro son Paul Cook por llenar los vacı́os donde deberı́a estar mi
memoria, Chrissie Hynde por escribir el pró logo, los editores Jason
Arthur y Ben Schafer, los abogados Peter Paterno y Jeff Silberman, el
agente literario Anthony Mattero, los hombres de dinero Paul Lima y Al
Pivo, mi manager Anita Camarata y su padre Michael Jewison que
ayudaron con la edició n, mis amigos Lori y Richard, Nina Huang y los
fotó grafos que me dejaron usar su imá genes que incluyen a Ray
Stevenson, Dennis Morris, Boogie y Robert Matheu.

Ben Thompson gracias:

Jason Arthur por poner mi nombre en el sombrero; Ray Winstone por


responder por mı́; Simon Petty por los servicios de limusina de Los
Angeles en el lugar; Paul Cook, la tı́a de Steve, Frances, a travé s de su
prima Wendy Brown, Chris Thomas y Julien Temple para entrevistas
adicionales; Matt Thorne, Kelly-Lee Alexander, Wesley Stace, Richard
King, Maya Biltoo, Jon Savage y Chrissie Hynde por sus ú tiles
conversaciones; Johnny Marr y sobre todo Nicola Barker por el rigor
editorial.
CRÉDITOS DE FOTOGRAFÍA
Sección 1:
Aquı́ Foto de Paul Cook/ Propia del autor
Aquı́ del propio autor
Aquı́ © Ray Stevenson
Aquı́ © Robert Matheu/ © John Tiberi
Aquı́ © John Tiberi

Sección 2:
Aquı́ © John Tiberi/ Fotografı́a de Dennis Morris, Camera Press London
Aquı́ © Ray Stevenson/ Autor propio
Aquı́ © Ray Stevenson/ © John Tiberi
Aquı́ © Ray Stevenson
Aquı́ © Brad Elterman Dog Dance LLC/ © Robert Matheu
Aquı́ © Robert Matheu

Seccion 3:
Aquı́ © Robert Matheu
Aquı́ del autor/ Foto de Frenchie/ Foto de Laurie Stark
Aquı́ © Robert Matheu/ Foto de Linda Nelson/ Cortesı́a de Nina Huang
Aquı́ © Chris Cuffaro
Aquı́ © 1996 Jimmy Steinfeldt/ Foto de Laurie Stark/ © Robert Matheu
Aquı́ fotos de Laurie Stark
Aquı́ Foto de Laurie Stark/ Fotos de Jenni Cook
Aquı́ Fotos por Mark Sovel y Amanda Estep

El editor y el autor han hecho todo lo posible para acreditar a los


propietarios de los derechos de autor de cualquier material que
aparezca en el interior, y corregirá n cualquier omisió n en las ediciones
posteriores si se les noti ica.
A principios de los noventa, volví a Benbow Road por primera vez desde que me fui a
Estados Unidos. El lugar había subido un poco, pero una vez un agujero de mierda,
siempre un agujero de mierda
Riverside Gardens desde el otro lado del paso elevado, justo al lado del
paso subterráneo de Nonce
Teddy Boys: mi verdadero padre, Don Jarvis, está en el extremo izquierdo.
De ahí viene mi sentido de la moda.
Mi madre se ríe, sucedió.
Mostrando las sedosas habilidades futbolísticas que luego me verían en el
Hollywood United junto a Vinnie Jones, el actor Anthony LaPaglia y Frank
Leboeuf del Chelsea.
Antes de descubrir la comida
Un escape por los pelos en Selfridges: en ese momento no me di cuenta
de lo joven que era
Este mono con el que podrías tomarte una foto en un espectáculo en
Olympia se estaba alimentando bien de los piojos en mi cabeza
El uniforme se ve bien, pero no aprendí nada.
Yo y Jimmy Macken en la ciudad
Magos del pinball
Grabando en los estudios de Wessex con mi Flying V. No creas que esta
guitarra realmente se incluyó en el álbum.
Los Pistols en la gira 'Anarchy'
Grabando el videoclip de 'God Save The Queen'. Me gusta la forma en
que parecemos iguras de cera en Madame Tussauds
John 'Boogie' Tiberi tomó este; debe haber sido en el extranjero porque no
tenían bidés en Inglaterra.
Subirse a un avión para ir a Suecia: se puede ver que es Viking Airlines
Aquí vienen los problemas
Gaye Advert me amenaza con su serpiente, pero a veces las serpientes que
no puedes ver son las más peligrosas.
Me 'n' Cookie: las cabinas de pasaportes eran el único lugar donde podías
tomar sel ies punk rock
En el lugar de Bell Street que Paul y yo compartíamos. Cookie está
enrollando un porro
Ese es McLaren disfrazado, ilmando The Swindle en Chesham: Malcolm es
una mujer encantadora
Solo los dos Pistols originales siguen en pie junto a este escenario. Esto fue
ilmado justo al lado de la rotonda de Shepherd's Bush: observe el hierro
corrugado en la esquina inferior derecha
Hola, mi nombre es Steve. Soy nuevo en la ciudad. Estoy buscando una
comida caliente, una ducha y una cama para pasar la noche.
Jimmy Page conoce a uno de sus héroes en el acto bené ico ARMS en el
Foro, 12 de diciembre de 1983
Chrissie y yo rompiendo en Los Ángeles, marzo de 1984
Ensayo pasado a cuadros: esta no es una cara que me verás poner a
menudo
Tan acertada como era nuestra moda de los ochenta, Checkered Past
también se trataba de la música.
Backstage con Checkered Past: ¿quién dice que los hombres de verdad
no usan delineador?
Citas dobles con Nina Huang, Iggy y el ave del momento de Iggy
Lamentablemente, no quedan pruebas fotográ icas de mi fase de moda
'Gerente de Poco', pero aquí está mi look 'Poldark' como pequeña
compensación
En el escenario con Iggy: comienza a sentir la vibra de Fabio aquí
Solo en el desierto con mi Gibson negra
Mis perros: primero fueron Buster y Winston, luego solo Winston II (el
boxeador, el perro más dulce)
Con mis buenos amigos Laurie y Richard y los mellizos (en la etapa
fetal) – siento que no hayas hecho la foto, Jesse Jo
Con Paul Simonon en nuestras bicicletas en el desierto de Mojave
Nina se ve linda
The Neurotic Outsiders, 1996. Esta fue una gran banda, pero supongo
que no estaba destinada a serlo.
¿Por qué soy tan guapo?
1996 Reunion Tour en Los Ángeles en el antes conocido como
An iteatro Universal
Con Vivienne, cuyo sentido de la moda también se ha desarrollado
desde la era punk.
Estoy usando un cinturón de castidad debajo de esto
Crystal Palace, 2002. Después del espectáculo, fui al puesto de perritos
calientes de Chelsea Bridge para atiborrarme. Estoy parado donde muchos
Ted y Grease se pararon. No me atrevería a pasar por delante de este
artilugio en 1977
Aquí estoy en todo mi esplendor, un verdadero ponce perfumado
Una foto rara de mí tomando un baño con algunos amigos. Muy lejos
del baño de estaño
El gran 5-0 con Laurie y Jesse Jo
Anita, yo manager, o yo uva muva
Yo en la estación en Jonesy's Jukebox con algunos de mis invitados: (en
el sentido de las agujas del reloj desde la parte superior izquierda) Dave
Grohl, John Taylor, Henry Rollins, Jack Black, Linda Perry, Gary Oldman,
Gene Simmons e Iggy Pop con Josh Homme

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