Una cosa.
Darlene Zschech
Una cosa que me llama poderosamente la atención,
es la responsabilidad espiritual que nos da nuestro
Señor y Rey. Nos ha confiado esta época de la
historia. Necesitamos crecer como lideres en las
cosas de Dios -sin perturbarnos
fácilmente-inconmovibles en la búsqueda de como
traer el cielo a esta Tierra. Lideres que traigan fe y
maten al miedo, que traigan danza y terminen con los
lamentos, que traigan coraje y echen fuera al
desaliento -en espíritu y en verdad- para gloria de
Dios.
Lo que todo adorador debe saber
Comprendiendo la adoración: Parte 1
Chris Jack
odos los cristianos lo hacemos. A veces lo
T disfrutamos. Muchas veces, no, si es que vamos a ser
sinceros. ^Por que molestarse? ^Para que? ^Hay algo mejor
que podamos hacer con nuestro tiempo?
Hablo de la adoración, por supuesto, y es un tema que con
frecuencia da lugar a debates enardecidos. Todos tenemos nuestras
preferencias; todos sabemos como hay que hacerlo, ¡y como no! En
esto, como en muchos otros aspectos de la vida, conocemos lo que
nos gusta, lo que nos atrae, lo que preferimos. Y hay tanto para
elegir: tradicional, contemporáneo, litúrgico, carismático,
alternativo, combinado... hay para todos los gustos. Como dice la
canción: "A mi manera".
Pero ¿que sucede cuando mi manera no es la tuya y estamos en
la misma congregación? Crece la tensión. Hay separaciones. Y
antes de que podamos saberlo se ha creado una zona de guerra. La
frase acunada para describir este tipo de situaciones es "guerra de
adoración". Desgraciadamente, hay muchas de estas guerras hoy
Lo que todo adorador debe -HI
saber
en las iglesias, y causan gran pena. Las batallas son por lo general
por cuestiones musicales.
^Pero esto es lo que mas importa? Al centrarnos en como
adorar, perdemos el centra de la cuestión. Debemos primero pensar
en lo que es la adoración, en por qué adoramos. Por supuesto, si no
entendemos el "que" y el "por qué", no importara el "como". Y
persistimos en disputas sobre estilos de adoración, como si fuera lo
que mas importa. En verdad, gran parte del tiempo va dedicado a
defender nuestras preferencias personales, aunque disfracemos
nuestro argumento con barniz teológico.
"La confusión abunda en nuestro mundo postmoderno, en
lo referente a la naturaleza de la adoración cristiana", dijo
Constance Cherry.
Bíblicamente, la adoración tiene que ver con responder a Dios
de manera adecuada. Y lo primero que debemos comprender es que
la adoración es principalmente, referida a Dios. Si bien podemos
decirlo, es fácil ver que en la práctica lo olvidamos. Vivimos en un
mundo egocéntrico, donde la autogratificacion, la autosatisfacción,
la autorrealización y todo lo que se le parezca, ocupan nuestra
actividad y determinan nuestra respuesta. Si no tenemos cuidado,
veremos que evaluamos nuestra adoración también de manera
egocéntrica. Claro que la adoración tiene que ver conmigo -porque
formo parte del servicio— pero no soy el tema principal.
Hay tres razones bíblicas clave para la adoración. Observe que
todas tienen como centre a Dios:
Dios merece nuestra adoración
La adoración es respuesta adecuada a Dios, por quien es El y
por lo que Él ha hecho. Este es un tema constante en la Escrituras,
que encuentra particular expresión en los Salmo (ver, por ejemplo,
los Salmos 98, 100, 104, 111). Adoramos a Dios por su infinita
grandeza y bondad, reconocemos su superioridad sobre nosotros,
Lo que todo adorador debe
saber
en todo. Y lo adoramos por su obra como Creador y Redentor. Algo
de esto esta pintado en Apocalipsis 4-5, capítulos que nos da un
glorioso cuadro de la adoración que ocurre en el cielo.
Dios pide nuestra adoración
La relación entre Dios y su pueblo, tanto bajo la vieja como la
nueva alianza, se ve establecida por iniciativa de Dios, y bajo sus
términos y condiciones. En el Antiguo Testamento la Ley entregada
en Sinaí es en efecto una afirmación de los términos de la alianza. En
esta afirmación esta el mandamiento de adorar a Dios. Implícito en
los Diez Mandamientos (Éxodo 20:1), y en otros pasajes (por
ejemplo Éxodo 23:25; Deuteronomio 6:13; Mateo 4:10). Y en el
Nuevo Testamento también la adoración es un requisito de la
alianza (ver Juan 4:22-24; Romanos 12:1; Hebreos 12:28). Además,
el pueblo de Dios bajo la nueva alianza se describe como
"sacerdocio real", cuyo llamado es a "declarar las alabanzas" de
Dios (1 Pedro 2:9). Así que, la adoración es un requisito, un deber -y
por ello, algo que debe hacerse sin que importe como nos
sentimos nosotros, como respuesta de nuestra voluntad- además
de ser una respuesta natural a Dios que fluye espontáneamente de
nuestras mentes y corazones. Sea cual fuere el caso, ¡la adoración es
de El, y sobre El!
Dios permite nuestra adoración
Finalmente, debemos observar que la adoración solo es posible
porque Dios la permite. Es El quien se revela en el Antiguo
Testamento, y quien reafirma esta revelación en la persona de su
Hijo, Jesucristo (J uan 1:18). Y es El quien, en Cristo, abre una
nueva base para relacionarse consigo mismo (2 Corintios 5:17-21), y
nos ofrece acceso directo a su presencia (Efesios 2:18; Hebreos
10:19-22). Lo más notable, es que sobre la base del sacrificio de
Cristo de si mismo, Dios acepte nuestra adoración y se deleite en
ella (Romanos 12:1; Filipenses 4:18). Lo más importante aquí es
Lo que todo adorador debe saber
que la adoración, en todas sus formas y expresiones, es ante todo
para placer de Dios y no para el nuestro.
Es una ironía que cuando vemos esto claramente —cuando
adoramos a Dios por los motivos correctos, según sus términos, y
porque Él nos lo permite- el resultado es que podemos disfrutar de El
como El desea que lo hagamos. Dejando de lado el lenguaje antiguo
-del siglo XVII- veamos que dice el Libro de Catecismo de
Westminster en cuanto a la adoración:
"¿Cual es el principal propósito del hombre? El principal
propósito del hombre es glorificar a Dios y disfrutar de El por
siempre".

Una cosa...
Brian Doerksen
La adoración es un acto de amor. Lo grandioso es
que no hay dos personas que expresen su amor de la
misma manera. £De que manera ha sido creado
usted para expresar su amor? ¡Alli residirá el poder
de su adoración!

lo que todo adorador debe saber lo que todo adorador debe saber
Una cosa...
Robin Mark
Se fiel a ti mismo. Se fiel a lo que eres y al lugar del
que provienes. A la cultura y el estilo musical
desarrollado en tu corazón por Dios, durante tu vida y
experiencia.
Comprendiendo la adoración: Parte 2
No te avergüences porque tu estilo no sea "de moda", Chris Jack
porque ^quien puede saber esto con exactitud? No te
engañes pensando que si puedes copiar el estilo "de
moda" que otros tocan, o su aparente creatividad,
podrás llegar a un mayor número de personas. **, hablamos en serio sobre entender la adoración, debemos
La Biblia esta llena de hombres y mujeres que Dios Estudiar lo que dice la Biblia acerca de ello. El primer paso es
eligió, que no se sentían ni únicos ni especiales. Y se lo Reflexionar en las palabras que hay detrás de la palabra
dijeron a Dios. Moisés dijo: "No se hablar bien". "adoración" La Biblia fue escrita originalmente en hebreo
Gedeón dijo: "Soy el menor de mis hermanos". Isaías: (Antiguo Testamento), y en griego (Nuevo Testamento).
"Soy hombre de labios impuros". Y Abraham se rio de Busquemos, entonces, las palabras hebreas y griegas.
Dios -gran error-. Sin embargo, Dios decidió que eran
las personas que El necesitaba. Dios utiliza a cada una "Hay un gran vocabulario de palabras en las Escrituras que
de estas personas, con todas sus debilidades, para puede contribuir a nuestro entendimiento del tema o de la
cumplir grandes cosas. Se fiel a ti mismo, y adora a doctrina de la adoración" (David Peterson, Engaging with
Dios. God, 1VP, 1992, p. 17).

En el Antiguo Testamento hay abundancia de palabras referidas

, la adoración. Este lenguaje muestra parte de la variedad y
extensión de la adoración de entonces: sus diferentes formas y
expresiones, su dimensión personal y comunitaria, sus fenómenos
ordinarios y extraordinarios.

lo que todo adorador debe lo que todo adorador debe 71

saber saber
 Todo esto nos informa que es la adoración y como debemos
ofrecerla. Hay tres palabras principales en hebreo, utilizadas en el
Antiguo Testamento para la adoración, las tres traducidas como
"adoración". La terminología bíblica nos muestra entonces que la
adoración es: sumisión, servicio y reverencia.
Es llamativo que las tres tengan paralelos directos en el griego
del Nuevo Testamento. Lo que esto significa -y es bueno marcarlo
desde el principio- es que hay coherencia y continuidad entre el
Antiguo Testamento y el Nuevo, en lo que se refiere a la adoración.
Por cierto, hay diferencias de contenido y forma, pero en términos de
la comprensión básica de lo que es la adoración y lo que implica, hay
una imagen fuertemente unificada a lo largo de toda la Biblia.
Cada una de estas palabras clave nos da un cimiento importante
para que comprendamos lo que es la adoración. De hecho, cada
una transmite un aspecto diferente de la actividad compleja y
multifacética, que llamamos adoración.
"Las palabras bíblicas para la adoración no representan
conceptos discretos, sino que son parte de un mosaico de
pensamiento sobre como relacionarnos con Dios. Son
ventanas importantes que dan a dicha estructura de
pensamiento" (David Peterson, Engaging with God, IVP,
2002).
La palabra más común para adoración en el Antiguo Testamento
es la hebrea hawah. Se la encuentra como hishtahawah, que
significa "hacer reverencia", "dar obediencia", "rendir homenaje",
y por supuesto "adorar". De las ciento setenta veces en que aparece
hawah en el Antiguo Testamento, casi la mitad (unas setenta y
cinco), se traducen como "adoración", en la Biblia NVI.
Aproximadamente, la misma cantidad de veces aparece traducida
como "reverenciar", o como "reverencia". En seis pasajes se utiliza
"rendir honor", y en uno, "rendir homenaje".
"Reverenciar" es claramente un componente vital del
significado de la palabra. Este gesto físico era comían en la cultura
12 Lo que todo adorador debe saber
de la época. Hacer la reverencia era mostrar respeto, mostrar que se
honraba a alguien. También podía indicar sumisión, especialmente
ante una figura de autoridad. Pero lo importante aquí es la
intención detrás del gesto. Por supuesto, como con todo gesto,
puede hacerse de manera superficial y hasta con hipocresía. La
acción y la actitud deben ir de la mano. Así que, como palabra para
adoración, hawah transmite la idea de honrar a Dios y expresar una
actitud de sumisión a El.
Ahora veamos la palabra griega proskuneo. Su significado ha
sido bien resumido por H. Schonweiss y C. Brown en The New
International Dictionary of New Testament Theology 2:
"Entre los griegos el verbo es un termino técnico para la
adoración de los dioses, que significa caer, postrarse, adorar
de rodillas... además del acto externo de postrarse en
adoración, proskuneo denota la actitud interna de reverencia y
humildad" (p. 876).
Proskuneo es la palabra mas común para indicar adoración en el
Nuevo Testamento (ver, por ejemplo Juan 4:20-24; Apocalipsis
5:14), como lo es hawah en el Antiguo. Entre otras cosas, destaca el
sentido de continuidad entre los dos Testamentos. La idea
primordial de la palabra es la de rendir homenaje, honrar con
espíritu de sumisión -y quizá con el gesto- a alguien que se
considera superior y valioso. Como con hawah, es esencialmente
cuestión de actitud interna que puede reflejarse en un gesto
externo. En ambas, el significado y el uso son paralelos.
La unidad de la visión del Nuevo y el Antiguo Testamento se ve
realzada por la utilización de estos términos paralelos. Esto debemos
entenderlo porque es importante. En lo esencial de la adoración, el
Antiguo y Nuevo Testamento presentan una imagen única y
armoniosa. Hay un desarrollo desde el Antiguo al Nuevo Testamento
en cuanto a formas y expresiones y, en particular, en el Nuevo
Testamento tenemos la singular revelación de Jesucristo, con todo lo
que esto significa en la adoración. Sin embargo, la esencia de la
adoración es constante, desde Génesis hasta Apocalipsis.
lo que todo adorador debe saber 75

Al ver el primer grupo de términos bíblicos, los paralelos entre
hawah y proskuneo, comenzamos a apreciar parte de la esencia de la
adoración: la adoración implica humilde sumisión a Dios.
El siguiente grupo de palabras bíblicas nos muestra que la
adoración implica trabajo o servicio. La palabra hebrea aquí es
'abad. Se la encuentra doscientos ochenta y nueve veces en el
Antiguo Testamento, y sus acepciones son: trabajar, hacer, realizar,
servir, adorar. En la NVI se traduce frecuentemente como "servir"
(ciento veinticinco veces). A menudo es en contextos en que Dios es
el objeto del verbo, Aquel a quien se sirve. La frase "servir al Señor
-Yahveh-", se utiliza cincuenta y seis veces. Y es en este uso en que
se transmite la idea de "adoración" (ver Éxodo 3:12, Deuteronomio
10;12, Isaías 19:21), aun cuando los traductores elijan "servir" en
lugar de "adorar".
Además de emplearse en diversos contextos en que se habla del
servicio a Dios, 'abad también se utiliza específicamente para el
servicio religioso, incluyendo lo relativo al culto -sistema de
sacrificios, etc.- (ver Números 3:7; 8:11). Todo el cisterna de
sacrificios, con sus rituales y detalles, fue dado por Dios para que su
pueblo, Israel, pudiera servirlo -adorarlo- de manera adecuada.
Pasemos al Nuevo Testamento: hay dos verbos griegos que
junto a otras palabras transmiten la misma idea de 'abad. Son
latreuo y leitourgeo. Latreouo aparece veintiuna veces en el Nuevo
Testamento y significa "servir", "adorar". Se traduce como "adorar"
ocho veces en la NVI, doce veces como "servir" una vez como
"ministrar". Todas las veces latreuo aparece en contextos religiosos
en que el "servicio" no se ofrece a otro ser humano sino a Dios (ver
Lucas 2:37; Hechos 26:7; Filipenses 3:3; Hebreos 12:28).
A pesar de que en el Antiguo Testamento (Septuaginta), el uso
primario de las palabras es en relación a la adoración ceremonial
del sistema de sacrificios, en el Nuevo Testamento, con la
excepción de Hebreos, es algo secundario.
El segundo verbo en griego, leitourgeo, aparece solo tres veces
en el Nuevo Testamento (Hechos 13:2; Romanos 15:27; Hebreos
10:11). Hay otros tres términos que debemos observar: leitourgia,
"servicio", "ministerio" -seis veces-; leitourgikos, "sirviendo",
lo que todo adorador debe saber
"ministrando" -una vez-; y leitourgos, "sirviente",
"ministro" -cinco veces-.
En sus diversas acepciones leitourgeo es muy cercano a latreuo.
Sin embargo, es de observar que en la Septuaginta —la traducción
griega de las Escrituras en hebreo, del siglo II 6 III d.C.— se utiliza
casi exclusivamente para el servicio de los sacerdotes y levitas en el
templo. Funciona efectivamente como termino técnico para dicho
servicio. En el uso de la palabra en el Nuevo Testamento, a menudo se
preserva esta asociación con el culto, particularmente en
Hebreos, donde se comparan la antigua y la nueva alianza (Lucas
1:23; Hebreos 9:21; 10:11). Pero otras veces se denota servicio no de
culto (ver Filipenses 2:25, 30).
La adoración, entonces, es servicio a Dios expresado no solo en
reuniones religiosas, sino en todas las áreas de la vida. Vale la pena
reflexionar sobre el hecho de que nos referimos a nuestras
reuniones frecuentemente como "servicios". No es inadecuado a la
luz de lo que provee esta segunda ventana de comprensión de los
términos bíblicos referidos a la adoración. j Debemos pensar, sin
embargo, hasta donde representan nuestros "servicios" un
verdadero "servicio" a Dios!
Ahora completaremos nuestra revisión del vocabulario bíblico
principal para "adoración"; miremos por la tercera ventana.
Veremos que la adoración es "temor" o "reverencia" de Dios.
La palabra hebrea yare', aparece mas de trescientas veces en el
Antiguo Testamento. La mayoría de las veces, en la NVI aparece
traducida como "miedo", "temor" o algún término relacionado.
Aproximadamente en el 80% de los pasajes en los que se halla el
verbo, el objeto del temor es Dios. El concepto del temor del Señor
aparece fuertemente en el Antiguo Testamento, especialmente en
los Libros Sapienciales. Por lo general, este temor no debe
entenderse como "terror" o "miedo", sino como una actitud de alto
respeto.
A veces la NVI traduce yare' como "adoración", quince veces en
total (Jueces 6:10; 1 Reyes 18:12; 2 Reyes 17:7, 25, 28, 32, 34, 35, 36,
37, 38, 39, 51; Isaías 29:13; Jonás 1:9). Por lo contrario, solo se
traduce de este modo una vez en otra versión (Josué 22:25). Es
lo que todo adorador debe saber
interesante observar que en esta versión, los traductores eligen
"adoración", en tanto la NVI utiliza "temor". Pero en 1 Reyes 18:12
"adoración" de la NVI corresponde a "reverencia" en la otra
versión. Obsérvese la flexibilidad de las posibilidades de
traducción.
Podemos concluir que cuando se utiliza en referencia a la
adoración, yare' destaca la idea del temor o respeto reverencial a
Dios.
"...la adoración como obediencia reverente marca el sentido
práctico del temor de Dios en la vida de la comunidad de fe,
formalmente en el servicio religioso propiamente dicho (...) e
informalmente en la vida en rectitud" (Andrew Hill, Enter His
Courts with Praise, A sus puertas en alabanza, Kingsway, 1998,
p. 4).
Andrew Hill pone énfasis aquí en las implicancias de la actitud de
temor o reverencia a Dios en términos de la obediencia.
Como lo expresa claramente la literatura sapiencial del Antiguo
Testamento, el "temor del Señor" consiste en un modo de vida que se
corresponde con la actitud interna de reverencia ante Dios. Y este
modo de vida en si mismo expresa adoración. Así que la adoración
no es solo acercarse a Dios con la actitud correcta -reverencia- sino
también el estilo de vida que proviene de dicha actitud.
El equivalente del Nuevo Testamento para yare' es sebomai. Se
utiliza una cantidad de veces en la Septuaginta parayare' (Job 1:9;
Isaías 29:13; Jonás 1:9). Sebomai aparece diez veces en el Nuevo
Testamento. Significa "reverenciar", "adorar", "ser devoto", y se
traduce como "adoración" seis veces en la NVI (Mateo 15:9; Marcos
7:7; Hechos 16:14; 18:7; 13; 19:27). También aparece en la NVI
como "temor de Dios" o "devoto" (Hechos 13:43, 50; 17:4, 17). En el
Nuevo Testamento aparecen varios términos relacionados.
Así, habiendo estudiado ambos grupos de palabras, el Nuevo
Testamento confirma una vez más una perspectiva de la adoración
Lo que todo adorador debe saber
ya presentada en el Antiguo Testamento. Esta vez, es la adoración
como reverencia ante Dios: la reverencia que implica una
dimensión de temor. nuestro Dios infunde respeto (temor)!
Infunde respeto y temor por su grandeza, su majestad y su
santidad, para destacar solo algunas áreas que en nuestro
pensamiento y adoración de hoy, no tienen el lugar que merecen.
^Es que las palabras de Tozer, en su predicación de hace cuarenta
anos, tienen mas de verdad hoy que nunca?
Encuentro que muchos cristianos no se sienten realmente
cómodos con los atributos santos de Dios. En dichos casos
me veo obligado a preguntarme sobre la calidad de la
adoración que intentan ofrecerle (A. W Tozer 'Awed by the
Presence of God'- Temor en Presencia de Dios, sermón
predicado en 1962).
Hay un versículo en el Antiguo Testamento que utiliza las tres
palabras hebreas para 'adoración' que hemos estudiado. Las tres
ventanas -la sumisión, el servicio y la reverencia- están juntas en un
mismo versículo: 2 Reyes 17:35. Es interesante comparar como las
diversas traducciones presentan este versículo:
"Con los cuales Jehová había hecho pacto, y les mando diciendo:
No temeréis (yare') a otros dioses, ni los adorareis (hawah), ni les
serviréis ('abad'), ni les haréis sacrificios" (Reina Valera)
«No adoren a otros dioses ni se inclinen delante de ellos; no les
sirvan ni les ofrezcan sacrificio" (NVI).
"Con los cuales el SENOR hizo un pacto y les ordeno, diciendo: No
temeréis a otros dioses ni os inclinareis ante ellos, no los serviréis ni
les ofreceréis sacrificios" (La Biblia de las Américas).
En principio, cada una de estas palabras podría traducirse como
"adoración": "No adoren... ni adoren... o adoren...", aunque seria
redundante y perdería las implicancias de las palabras en hebreo.
Alternativamente, podría elegirse no traducir ninguna de las
palabras como "adorar". De una u otra forma, sin embargo, el
versículo se refiere a la adoración. Es verdad en esta instancia que
lo que todo adorador debe 77
saber
se refiere a la adoración de "otros dioses"; la adoración que el Señor
insiste que no debe ofrecerse. Pero no que no debe ofrecerse a
"otros dioses" y debe ofrecérsele al único Dios verdadero, como
indica el versículo que sigue.
Lo importante aquí es entender que estos tres conceptos
-sumisión, servicio, reverencia- no son alternativas que
representen tres formas diferentes de adoración.
Por lo contrario, son tres facetas de una misma actividad
compleja, que es la adoración. De este modo comenzamos a
comprender parte de la naturaleza de la adoración desde una
perspectiva bíblica.

Una cosa...
Rita Springer
A veces, cuando vemos que la adoración toma forma
con música grandiosa y excelente sonido, vemos el
talento y no observamos que la adoración sincera
suele tener un precio. Podemos buscar el resultado
final, ignorar lo que en el medio nos lleva alii.
La vida nos presenta muchas circunstancias y
sueños, que a veces vienen con un calendario y una
caja de paciencia. En esas épocas, mientras
esperamos, tenemos una gran oportunidad de
conocer mejor a Jesus, y hacer que otros lo conozcan
por medio de nosotros.

78 lo que todo adorador debe saber

Lo que todo adorador debe saber
79
 Una cosa...
Nigel Morris
Siempre adoramos a Jesus en respuesta a quien es El, o
a como percibimos que es. Si es pequeño en nuestros
corazones y mentes, nuestra respuesta será mínima,
mecánica y hasta vacía. Pero si lo vemos como
realmente es, si sabemos lo que ha hecho por
nosotros, entonces pondremos nuestra vida y recursos
al servicio de una gozosa respuesta desde lo más
profundo de nuestro corazón.
lo que todo adorador debe saber
108
Comprendiendo la
adoración. Parte 3
Chris Jack
Formas de adoración en el Antiguo
Testamento
"La adoración no es un invento reciente." Derek Tidball nos
recuerda esto en su breve estudio de la adoración, en On the Bridge
(Sobre el puente), (Baptist Union, 1992). Las raíces de la adoración
cristiana datan de hace mas de dos mil anos, desde la era del
Antiguo Testamento. En verdad, no podemos comprender las
enseñanzas del Nuevo Testamento sobre la adoración, sin apreciar
la adoración en el Antiguo.
Para muchos cristianos el Antiguo Testamento es un libro
misterioso y aparentemente irrelevante. El punto donde
más distante aparece respecto de las necesidades y
aspiraciones de las personas de culturas secularizadas, es
cuando se concentra en el templo, el sistema de sacrificios y
el sacerdocio. Sin embargo, estas instituciones eran el
Lo que todo adorador debe saber 109
 corazón del pensamiento antiguo sobre la adoración, y
debemos comprender su importancia si queremos
entender las enseñanzas del Nuevo Testamento (David
Peterson, Engaging with God, IVP, 2002, p. 23).
Por ello es que comenzamos con el Antiguo Testamento, a pesar
de que la adoración alii se ve tan distinta de lo que conocemos los
cristianos. No recuerdo haber asistido a un servicio de domingo en
que se haya ofrecido un buey o un cordero como ofrenda y, sin
embargo, aunque la adoración de los cristianos es muy distinta en
varios aspectos respecto de la del Antiguo Testamento, si
encontramos valores y patrones que son fundamentales a ambos.
Hablamos de la adoración en el Antiguo Testamento como
entidad uniforme y única. Pero lo primero que debemos observar es
que dentro del Antiguo Testamento hay diversidad en términos de
las formas utilizadas para expresar adoración. El Antiguo
Testamento es un compendio literario extenso. Sus treinta y nueve
libros fueron escritos durante un largo periodo de tiempo, y
abarcan varios milenios de historia. Durante ese tiempo, desde los
patriarcas hasta la era posterior al exilio, la adoración no fue
estática. Sufrió cambios y evoluciono. Esta evolución es
esencialmente debida a la revelación continua y progresiva de Dios
sobre su persona y sus requerimientos a su pueblo. Y, por otra
parte, se debe a las circunstancias y contextos diferentes en que se
encontraba el pueblo de Dios en cada etapa.
Ejemplo de esto, si nos centramos en el 'locus' o lugar de la
adoración, veremos:
Evolución de la adoración en el Antiguo
Testamento
Periodo patriarcal Lugares sagrados
Éxodo - Establecimiento en Canaán Tabernáculo
Monarquía Templo
Exilio Sinagogas
Restauración Segundo templo
no lo que todo adorador debe saber
Detrás del tema aparentemente simple de donde se reunían las
personas para adorar a Dios, hay una cantidad de temas asociados
que reflejan parte de la variedad y diversidad de las prácticas de
adoración del Antiguo Testamento, como veremos a continuación.
Durante el periodo patriarcal -las historias de Abraham, Isaac,
Jacob y Jose, que figuran en Génesis— la adoración era mayormente
informal; no hay requisitos absolutos de sacrificios; no hay rituales
establecidos para la ofrenda de sacrificios cuando se ofrecen, y no hay
lugar fijo ni en términos de templo ni de santuario. Además, no hay
sacerdocios. Es verdad que se dan ciertas instrucciones -por ejemplo
en Génesis 15:9- pero son en relación a un acto especifico de
adoración y no a la norma establecida. Aquí el sacrificio es un
elemento común aunque no esencial -por ejemplo Génesis 28, Jacob
en Bethel-.
La adoración puede ofrecerse en cualquier lugar y no esta
restringida a ubicaciones especificas. Sin embargo, hay lugares que
adquieren un significado particular por asociación con un
encuentro con Dios. Alii se erigen altares, que se convierten en
lugares sagrados especialmente adecuados para ofrecer sacrificios y
para futuros encuentros con Dios -ver Génesis 35:1-14-. De todos
modos, estos lugares sagrados no son sitios exclusivos de
adoración; siempre existe la posibilidad de un encuentro con Dios
en un lugar nuevo, que a su vez se convierte en un nuevo lugar
sagrado. Dios no esta atado a un lugar o grupo de lugares.
La adoración patriarcal es espontanea e implica respuesta a una
revelación de Dios en particular, o a su intervención por las
personas que lo adoran. Por lo general, es una respuesta individual o
familiar, pero intensamente personal.
"La adoración patriarcal tiene inicio y motivación divinos
(...) Se adora a Dios solo cuando El elige revelar aspectos de
su propósito y carácter divino a los seres humanos, por
medio de dichos y hechos (...) la adoración de Dios es
respuesta a su revelación divina" (Andrew Hill, Enter His
Courts with Praise, Baker Book House, 1997, pp. 31-f).
Lo que todo adorador debe saber
 Así que el patrón de adoración que emerge en la era patriarcal
del libro de Génesis es informal, flexible, espontaneo y personal.
Siempre es en respuesta a la iniciativa de Dios.
A pesar de que la forma externa de la adoración evoluciona
durante el periodo del éxodo, la adoración ofrecida no se ve menos
condicionada por la iniciativa de Dios. Es de hecho una respuesta al
acto de liberación de Dios, el éxodo. Para los israelitas esta era la
iniciativa de Dios -Yahvé- más importante en beneficio de su
pueblo, conmemorada a perpetuidad en la Pascua. Por supuesto, la
Pascua, además de ser efemérides, es un acto de adoración.
El éxodo, el acto redentor de Dios mediante el cual los israelitas
fueron gloriosamente liberados de la esclavitud en Egipto (Éxodo
1-15), es el evento definitorio de la historia de Israel. A menudo se
menciona mas tarde -unas ciento veinte referencias en el Antiguo
Testamento-. Por medio del éxodo y el subsiguiente encuentro
con Dios en Sinaí (Éxodo 19), Israel llego a ser oficialmente el
pueblo de Dios. La base de esta relación única es la alianza que
Dios conformo con su pueblo (ver, por ejemplo, Éxodo 19:1-18). Se
establecieron los términos de esta alianza en la Ley que Dios les
dio alii.
Otra de las provisiones de Dios en Sinaí era el culto (o cultus).
Este es el término utilizado para abarcar todo lo referente a la
adoración formal centrada en el Tabernáculo -y, más tarde, en el
Templo- con sus sistemas de sacrificios, sacerdocio, rituales y
objetos sagrados. En el contexto de la entrega de la Ley y las
detalladas instrucciones respecto de la construcción del
Tabernáculo y de la adoración que se llevaría a cabo alii, se destaca
un principio fundamental de la adoración: la obediencia a Dios.
"...absoluta obediencia a Dios, el Creador y Redentor,
es el requerimiento básico necesario como quien
actitud de verdaderamente adora a Dios" (Yoshiaki
En Sinaí Dios estableció formalmente el modo en que debía
expresarse la adoración. Y un aspecto central es el sacrificio. El
Hattori).
112 Lo que todo adorador debe saber
sacrificio tenía un rol central en la adoración comunitaria de Israel.
Además, había solo un santuario oficial para ofrecer sacrificio: el
Tabernáculo. Para conocer los detalles, vea Éxodo 25-31 y 35-40, y
también el libro de Levítico.
Una vez más, entonces, la adoración se ve como respuesta a la
iniciativa de Dios. Y más que eso, ahora también es en respuesta a
sus instrucciones. Él le dice a su pueblo precisamente como deben
adorarlo. Es un paso claro en la evolución a partir de la adoración
informal de la era patriarcal.
El Tabernáculo era un santuario portátil. Con el tiempo, cuando los
israelitas se establecieron en la tierra de Canaán -la Tierra
Prometida- el Tabernáculo fue remplazado por el Templo. Este
último, construido por el rey Salomón, era un santuario
permanente ubicado en Jerusalén. Terminado el Templo (1 Reyes
5-7; 2 Crónicas 2-4), el área de la alianza que simbolizaba la
presencia de Dios, se transfirió alii, y se dedico el Templo (1 Reyes 8;
2 Crónicas 5-7). La descripción de los fenómenos
acompañantes, de la nube y el fuego (2 Crónicas 5:13; 7:1), en
relación con la gloria de Dios en el texto, tiene un fuerte paralelo
con el relato de la complexión del Tabernáculo en Éxodo 40:34-38.
Este paralelo confirma la legitimidad del Templo como nuevo
santuario.
En la practica, además de la tendencia hacia los detalles
elaborados en la ceremonia asociados con los rituales, sin duda
promovidos por la grandeza del entorno, no bubo mayores
cambios. La adoración en el Templo era esencialmente la
continuación de la adoración en el Tabernáculo.
Los eventos cataclismos del exilio, con la destrucción de
Jerusalén y su Templo, junto con la deportación de muchos de sus
habitantes, causo cambios obligados en la adoración de Israel. Sin
santuario, ni culto, ni lugar de reunión, los judíos debieron
adaptarse. Lo hicieron dándole un lugar central a la Tora, la Ley,
presentada en las Escrituras. Entonces se convirtieron en gente que
seguía instrucciones al pie de la letra. Aunque los orígenes de la
sinagoga —tan importante en los Evangelios— no están del todo
claro, se cree que aparecieron durante el exilio. No eran mini
lo que todo adorador debe saber 115
templos, porque no se llevaba a cabo en ellas el culto. Eran lugares
de reunión donde los fieles se reunían a orar y a leer la Tora.
Luego del exilio, cuando los judíos volvieron a Jerusalén —la
Restauración— se reconstruyo el Templo y se restableció el culto. A
este periodo se lo conoce como el del Segundo Templo. Se
extiende hasta la destrucción del templo por los romanos en el ano
70 d.C. La Restauración no debe verse simplemente como un
retorno a las formas antiguas. Si bien bubo un retorno a la
adoración centrada en el templo, las sinagogas siguieron
cumpliendo su función, especialmente para quienes Vivian lejos
del Templo; y la Tora mantuvo su lugar como factor controlador de
la vida y la religión de los judíos, con gradual aumento del dominio
de quienes tenían autoridad para ensenarla -los escribas- y con
Una cosa.
frecuente tendencia hacia el legalismo en su interpretación y su Andrew Maries
aplicación. Equilibre el aspecto comunitario de la adoración, y
comprenda que la presencia de Jesus no se halla solo
Los mil quinientos anos entre Abraham y Esdras -circa "detrás del velo" en una experiencia individual de
1900-450 a.C.- vieron grandes cambios en la forma de adoración personal e intima. Somos llamados a
adoración del antiguo Israel (...) Si la forma de la adoración adorar juntos, como cuerpo de Cristo. San Pablo, en
cambio con los tiempos y las situaciones, su centre y Efesios 1:23, dice que la iglesia es: "La plenitud de
corazón no se modificaron". (G. J. Wenham, "Worship", en Aquel que todo lo llena en todo". Estamos perdiendo
Marshall Pickering Encyclopedia of the Bible 2, p. 2164). esto hoy, y hemos sido demasiado influenciados por
la tendencia individualista, consumista del resto de
Las formas cambiaron, pero el corazón y centre se la sociedad. Comencemos a cantar más sobre
mantuvieron. La adoración legitima de Israel siempre fue -en "nosotros" que sobre "yo".
todas sus formas- una respuesta a la iniciativa de Dios, y
expresión de obediencia a El.

lo que todo adorador debe saber

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