Documento 3.

4 - Anatomía del Sistema Nervioso 4

Cerebelo

Se sitúa dorsalmente al bulbo y puente, delimitando conjuntamente al cuarto ventrículo. Está alojado
en la fosa craneal posterior de la base craneal, y se comunica con las porciones del tronco encefálico mediante
tres pares de pedúnculos cerebelosos. En un corte sagital, presenta forma de cuña: posee una cara superior
que se relaciona con el tentorio cerebelar (un septo dural), y una cara inferior que reposa sobre la escama del
hueso occipital; la cara anterior, en cambio, es más irregular y se comporta como una especie de “hilio”
cerebelar limitado arriba y abajo por la “cabeza” y “cola” del vermis cerebelar (como una especie de
ourobouros) y que permite el ingreso de los pedúnculos cerebelosos superiores, medios e inferiores ya
reunidos en una masa común (pero siendo aún distinguibles uno de otro).

El cerebelo está constituido por una parte central, denominada vermis cerebelar, y dos porciones
laterales voluminosas, los hemisferios cerebelares. Además, también es posible dividir al cerebelo de acuerdo
a su función: el lobo anterior es responsable del tono muscular en cuanto a la postura corporal, mientras que
el lobo posterior se relaciona con la coordinación motora; finalmente, el lobo floculonodular tiene a su cargo
el equilibrio. El lobo anterior se observa mayoritariamente en la porción anterior de la cara superior del
cerebelo y en la mitad superior de su cara anterior. La porción posterior de la cara superior sumada a la
totalidad de la cara inferior cerebelar corresponden al lobo posterior (el de mayor tamaño y desarrollo en el
humano). La mencionada división de la cara superior en dos porciones está marcada por la fisura
prima/primaria. El lobo floculonodular, de mucho menor tamaño y más irregular, comprende una pequeña
porción del vermis cerebelar, el nódulo vermiano, y otras de los hemisferios cerebelosos, los flóculos, todo
esto presente en la cara anterior del cerebelo. La fisura posterolateral separa al lobo floculonodular del lobo
posterior. El estudio detallado del vermis cerebelar y de los hemisferios cerebelares revela que para cada
porción del vermis existe una porción asociada, lateral, en los hemisferios cerebelares; por ejemplo, el culmen
del vermis cerebeloso se relaciona con el lóbulo/lobulillo cuadrangular en los hemisferios cerebelares,
mientras que la úvula vermiana se vincula a las tonsilas cerebelares de los hemisferios cerebelosos.

A diferencia de los segmentos del tronco encefálico, el cerebelo posee una corteza de sustancia gris
(delgadamente plegada y por ello denominada folio cerebelar) donde están alojados los diversos tipos de
cuerpos neuronales que componen la corteza cerebelar. Profundo a dicha corteza, se encuentra la sustancia
blanca que toma aspecto de árbol de la vida y que aloja a 4 núcleos cerebelares que, de lateral a medial, son:
núcleos dentados (los más grandes), emboliformes, globosos y fastigiales.