HECHIZOS Y BRUJERÍAS - MALEFICIOS Y SUS CAUSAS

Con respecto a las consecuencias por causa de maldiciones, hechizos, brujerías etc. sobre la vida
de un ser humano, la Biblia dice:

(Proverbios 26:2) "Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo. Así la maldición
nunca vendrá sin causa"

En la vida existen enemigos de todo lo bueno; enemigos del cristiano e incluso enemigos de la vida
que Dios ha creado. El mensaje de (Pro. 26:2) significa que las maldiciones nunca llegan a la vida
de un cristiano o del ser humano en general, sin que previamente haya un pecado que provoque la
entrada de dichas maldiciones y sus consecuencias.

En la Biblia, los “hechizos” son citados desde el principio de historia de la humanidad. En el libro de
(Deuteronomio 18:10-11) se incluye como abominables a todos aquellos que lanzan maleficios, así
también como quienes cometen otros actos de brujería “execrables” tales como el sacrificio de
niños, la hechicería, los sortilegios, la adivinación, o la necromancia (consultar con los muertos).

El profeta Miqueas señala con absoluta certeza, que Dios DESTRUIRÁ las hechicerías y a aquellos
que lanzan hechizos contra el pueblo de Dios.

(Miqueas 5:9, 11, 12, 13 y 15) "Tu mano se alzará sobre tus enemigos, y todos tus adversarios
serán destruidos. Haré también destruir las ciudades de tu tierra, y arruinaré todas tus fortalezas.
Asimismo destruiré de tu mano las hechicerías, y no se hallarán en ti agoreros. Y haré destruir tus
esculturas y tus imágenes de en medio de ti, y nunca más te inclinarás a la obra de tus manos. y
con ira y con furor haré venganza en las naciones que no obedecieron".

Por causa de las prácticas de hechicería, la tierra es contaminada y las maldiciones afectan a todos
aquellos que no poseen la protección de Dios.

(Deuteronomio 18:9-12) "Cuando entres a la tierra que Jehová tu Dios te da, no aprenderás a
hacer según las abominaciones de aquellas naciones. No sea hallado en ti quien haga pasar a su
hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni
encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con
Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas
naciones de delante de ti.
En el libro de (Apocalipsis 18) se describe las hechicerías como parte del engaño que será usado
por el Anticristo y su “gran ciudad de Babilonia” (v. 21-24) no obstante, el engaño será tan grande,
que aún muchos creyentes en Dios serán engañados; pero Dios protegerá a su pueblo (Mateo
24:24). Al final, Dios destruirá a Satanás, al anticristo, y a todos los que los sigan.

LA LUCHA ESPÍRITUAL DEL CRISTIANO Y LAS HECHICERÍAS

En la historia bíblica se menciona el caso de un rey perverso llamado Balac; quien intento maldecir
al pueblo de Israel; por medio de maleficios y agüeros.

(Números 22:6, 9, 10, 12 y 17)... Dijo entonces Balac rey de Moab al profeta de Dios.. "Ven pues,
ahora, te ruego, maldíceme este pueblo, porque es más fuerte que yo; quizá yo pueda herirlo y
echarlo de la tierra; pues yo sé que el que tú bendigas será bendito, y el que tú maldigas será
maldito. Y vino Dios al profera, y le dijo: ¿Qué varones son estos que están contigo?. Y el profeta
respondió a Dios: el rey Balac hijo de Zipor de Moab, ha enviado a decirme que maldiga a Israel.
Entonces dijo Dios a Balaam: No vayas con ellos, ni maldigas al pueblo, porque bendito es.

Cuando en la vida de una persona no existe la protección de Dios; las maldiciones que son
enviadas por los enemigos de esa persona, pueden llegar y hacer mucho daño. Pero cuando es
Dios quien protege al hombre, y cuando ese hombre está viviendo en plena comunión con Dios,
no existe ninguna maldición que logre hacer blanco en su vida. Así finalmente lo pudo reconocer el
profeta.

(Números 23:8, 10, 20, 21 y 23) "¿Por qué maldeciré yo al que Dios no maldijo?. ¿Y por qué he de
execrar al que Jehová no ha execrado?. Muera yo la muerte de los rectos, y mi postrimería sea
como la suya. He aquí, he recibido orden de bendecir al pueblo de Dios; El dio bendición, y no
podré revocarla. No ha notado iniquidad en su pueblo, ni ha visto perversidad en Israel. Jehová su
Dios está con él; Porque contra el pueblo de Dios no hay agüero, Ni adivinación contra Israel.
Como ahora, será dicho de Jacob y de Israel: ¡Lo que ha hecho Dios!"

El apóstol Pablo menciona que los hijos de Dios tenemos lucha contra el mundo espiritual de los
demonios.
(Efesios 6:12) "Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra
potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de
maldad en las regiones celestes".

Y contra ese mundo espiritual, solo sirve la protección de Dios para estar a salvos de toda
maldición y hechizo.

(Salmos 127:1) "Si Jehová no edificare la casa. En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no
guardare la ciudad. En vano vela la guardia.

CONCLUSIÓN

Las maldiciones y hechizos siempre han estado presentes desde los orígenes de la humanidad.
Este fue uno de los motivos principales por los que Dios destruyó muchas naciones y las extermino
del planeta; para que no siguieran contaminando la tierra.

Una persona que practica brujería, adivinación, cartomancia, agorero, hechicería, etc no solo se
encuentra bajo la ira de Dios; sino que también lleva una cadena de maldición generacional sobre
sus hijos y descendencia.

(Éxodo 20:5) ".. Porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres
sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen".

Las maldiciones y hechizos no tienen potestad sobre los hijos de Dios. A menos que exista una
razón o un pecado que esté permitiendo a los espíritus malignos atacar la vida del creyente.

(Proverbios 26:2) "Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo. Así la maldición
nunca vendrá sin causa"

En la historia que relatamos en el libro de (Números 22) el profeta no pudo maldecir al pueblo de
Dios, debido a que fue Dios mismo en Persona quien se lo prohibió. Pero la historia tuvo un
desenlace trágico al final. Ya que el profeta por amor a las riquezas que le ofreció el rey Balac de
Moab; enseñó al rey Balac la forma en que las maldiciones podrían llegar y dañar al pueblo de
Dios, a quien el odiaba.
(Apocalipsis 2:14) "Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la
doctrina del profeta, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de
cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación.

Por tanto, es posible entender que una persona (cristiano o no creyente) puede ser alcanzado por
los maleficios y hechicerías, cuando mantiene una vida pecaminosa entregada a la IDOLATRÍA y a
los pecados SEXUALES como adulterio y fornicación.

La única forma de estar protegidos de todo ataque de brujería, es que Dios esté de nuestro lado; y
que nuestras vidas estén guardando la Santidad con Dios, lejos de todo tipo de pecado. Y que la
sangre preciosa de Cristo nos cubra y nos selle para no caer bajo la maldición del enemigo.

(Éxodo 12:13) "Y la sangre del Cordero les será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré
la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad".

Solo Dios y su preciosa Sangre tiene el poder para destruir toda maldición o hechizo. Pero aquellos
que no se encuentran bajo la propiedad de Dios; podrán ser alcanzados.