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En 1876 que fue donde comenzó el Porfiriato, protagonizado por el general Porfirio

Díaz. Baso su crecimiento en tendencias capitalistas, al tener sobretodo tanto


capital nacional como extranjero en la creación de ferrocarriles, puertos marítimos,
minas, bancos y una colosal cantidad de inversiones y capital extranjero. Si bien
logro un crecimiento económico de 1900 a 1910 del 3.3% anual que hizo mover la
maquinaria nacional después de varios años de estancamiento en guerras y
deudas, en esta época se acentuó el principal problema del capitalismo: la división
de clases sociales. A este modelo económico se le conoce como “Modelo de
crecimiento hacia afuera” u “Orientado hacia la exportación”.

Después de la crisis, el presidente y dios supremo Lázaro Cárdenas comenzaría a


maquinar un nuevo modelo económico, que tenía tendencias nacionalistas, con el
cual quería aumentar la actividad económica, pero con la intervención del capital
mexicano. Este modelo llamado “Nacionalismo económico” se caracterizaba por
conservar los recursos naturales y estimular una industria propia mexicana, con el
propósito que nuestra economía fuera independiente. Este modelo económico
seria el desarrollo económico hacia adentro.

Durante la segunda guerra mundial, México comenzó a desarrollar el modelo de


crecimiento hacia adentro el cual decía que, debido a la crisis de otros países, por
lo cual se optó por fabricar artículos manufacturados propios para no importarlos,
ya que estos empezaban a escasearse en otras naciones, lo cual nos llevó a
aprovechar el capital nacional y la creación o el fortalecimiento de empresas
dedicadas a la fabricación de bienes de consumo no duradero, así como: comía y
vestido.

Después de todo ese desarrollo Nacional termino el sexenio de Miguel Alemán, la


industria no había respondido de manera suficiente a las expectativas nacionales,
por lo cual el modelo de crecimiento hacia adentro en crisis, pero llego otro modelo
económico de la mano del presidente Ruiz Cortinez el cual era “El modelo de
Desarrollo estabilizador”, que tenía por objeto reducir la inflación y hacerse de
tecnología de punta para maximizar el desarrollo industrial.
Y así siguió hasta el sexenio del presidente Luis Echeverría donde se lanzaron
muy fuertes críticas al respecto del Modelo de desarrollo estabilizador, y así dando
comienzo al “Desarrollo Compartido” que, en pocas palabras, era pedir dinero
prestado a otros países y gástalo desmedidamente, dando origen a la deuda
externa.

Más tarde en el sexenio de López Portillo se da un Nuevo modelo económico el


cual fue “Modelo de Crecimiento Acelerado”, en el petróleo debido a la alza de
precios establecidos por la OPEP, y que se descubre nuevos yacimientos, que
superaban las expectativas económicas del país, se establecieron políticas de un
mayor gasto público y mayor emisión del dinero, también se cerraría el ciclo de las
administraciones públicas que se negaban al desarrollo económico hacia afuera y
se cancelaban los mercados nacionales.

De la mano de Miguel de la Madrid llegaba el bendito Neoliberalismo el que


prevalece aun en la actualidad, que se ha caracterizado por presentar tasas de
crecimiento económico menores y más volátiles que en las pasadas décadas
finalmente logro acrecentar la deuda externa, la privatización de servicios públicos,
la firma del tratado del libre comercia con USA y Canadá, lo cual solo invito a traer
empresas a extraer los recursos del país y que la economía mexicana dependiera
totalmente de la estadounidense, la devaluación del peso, desempleo,
delincuencia, etc.

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