Existen múltiples formas de clasificar los riesgos, desde la academia, desde la
práctica, desde lo legal, etc., conocer los distintos tipos de riesgos que pueden existir hace que resulte más sencillo tenerlos en cuenta en el momento de su identificación. Para esto es necesario conocer el mayor número de riesgos que pueden surgir, sus posibilidades, las causas que los originan y las distintas formas en las que tienden a manifestarse. Factores que se utilizarán para la posterior valoración de las posibles consecuencias de estos riesgos, la estimación de su coste, y la medición, efectos y gestión de los mismos. El objetivo de la clasificación de riesgo es determinar hasta qué grado es factible combatir los riesgos encontrados. La factibilidad normalmente depende de la voluntad y posibilidad económica de una institución, sino también del entorno donde nos ubicamos. El riesgo es la probabilidad de que una amenaza se convierta en un desastre. La vulnerabilidad o las amenazas, por separado, no representan un peligro. Pero si se juntan, se convierten en un riesgo, o sea, en la probabilidad de que ocurra un desastre. Sin embargo los riesgos pueden reducirse o manejarse. Si somos cuidadosos en nuestra relación con el ambiente y si estamos conscientes de nuestras debilidades y vulnerabilidades frente a las amenazas existentes, podemos tomar medidas para asegurarnos de que las amenazas no se conviertan en desastre. Los términos riesgo y peligro están emparentados y suelen ser usados como sinónimos, sin embargo, existe entre ellos una diferencia fundamental. El peligro es todo suceso o fuente que tiene potencial de causar daño, por otro lado, el riesgo es la probabilidad de que ese suceso ocurra y sus posibles consecuencias. Es decir, no toda situación peligrosa es de por sí riesgosa. Muchas acciones son peligrosas, pero es posible mitigar o reducir los riesgos de que causen daño. La seguridad es un tema fundamental sobre todo en estos tiempos, es por ello que se hace imperante la necesidad de conocer de qué forma puede esta verse vulnerada, por ello que resulta vital conocer los diferentes riesgos que existen y que podrían representar una amenaza a nuestra seguridad entendida esta desde cualquier punto de vista. Existen diversos tipos de riesgos; riesgos naturales, que implican la probabilidad de que ocurra en un determinado espacio físico un hecho o evento natural, como nevadas fuertes, olas de calor o frío, huracanes, tormentas eléctricas, aludes, sequías, inundaciones, incendios forestales, entre otros, biológicos, que es la probabilidad de que la salud de las personas u otros animales se vea afectada por la presencia de organismos como endoparásitos, virus, bacterias, esporas, cultivos celulares, hongos, riesgos laborales. Implican la probabilidad de que los individuos sufran daños a causa del trabajo. Los daños pueden ser: psicosociales (suelen deberse a malos ámbitos laborales o la excesiva carga laboral) o físicos, que están dados por las malas condiciones laborales, como una mala iluminación, temperaturas ambiente muy bajas o muy altas, ruidos molestos. Químicos. Implican la probabilidad de un organismo o del medio ambiente de sufrir daño al estar expuesto a agentes químicos, como el arsénico, el cianuro, el etanol, el uranio, el cloruro de calcio, el monóxido de carbono, entre muchos otros. Los daños que provocan la manipulación o el contacto con agentes químicos varían según el agente, existen agentes más o menos peligrosos que pueden ser inflamables, corrosivos, radioactivos, irritantes o tóxicos. Riesgos sanitarios. Implican la probabilidad de que un determinado suceso afecte la salud de personas o grupos. Este suceso puede tener una causa natural, como es el caso de una pandemia, o ser provocado por el ser humano, como un escape de gas en una fábrica. Por medio de la clasificación resulta inevitable pensar que el riesgo está presente prácticamente en todos los momentos de la vida es por ello la importancia que tiene conocerlos puesto es precisamente este conocimiento lo que colaborara a su prevención de modo de que nuestra seguridad no se vea vulnerada tan fácilmente. Del mismo modo podemos ubicarnos en el riesgo al cual nos encontramos más expuesto a diario y esto a su vez resulta de gran beneficio a la hora del manejo de lo que sería la adecuada prevención del mismo.