Ética de la hospitalización del enfermo mental: La vida Intrahospitalaria y
sus dilemas éticos. La Internación compulsiva.
Cuando un paciente con una enfermedad mental crónica o severa se encuentra
en un contexto de hospitalización, el comportamiento ético de quienes tratan al paciente debe estar dirigido a acciones que garanticen una vida digna. Los dilemas éticos que se presentan en la hospitalización de un paciente se dividen en dos: los tratos que afectan a la dignidad humana y los tratos que favorecen la independencia y los lazos familiares. En el primer caso, se hace énfasis en que el paciente tiene derecho a no recibir ningún tipo de castigo, restricciones o reclusiones, a no ser que estas sean necesarias para un objetivo terapéutico. En el segundo caso, es de suma importancia que la vida dentro del hospital sea lo más parecida a la del medio del paciente.
En lo que se refiere a la asistencia de pacientes con enfermedades mentales
crónicas existen varios tipos de dilemas éticos.
Asistencia personalizada y digna
Se refiere a que cada caso debe ser tratado de forma única, tomando en cuenta que cada individuo es diferente y que los criterios estándar de asistencia no siempre son determinantes para cada caso en particular. Es por esta razón que la personalización de la asistencia es de gran importancia. Además de tener la implicación ética del respeto a la dignidad del paciente.
Esta asistencia personalizada tiene las siguientes características: accesibilidad,
relación, comunicación, individualidad, conjunción, flexibilidad y continuidad. En el pasado, se consideraba que los hospitales psiquiátricos eran los únicos espacios capacitados para tratar a personas con enfermedades mentales crónicas. Sin embargo, en la actualidad existen diferentes lugares alternativos en los cuales se brindan una asistencia más personalizada. Estos lugares son los hogares de apoyo, los hospitales de día, los hogares satélites y las residencias permanentes.
Ética de la hospitalización del enfermo mental
Existen algunos factores que justifican una internación compulsiva, es decir, sin el consentimiento del paciente. Se entiende como internación compulsiva a una internación de emergencia, en la cual no se toma en cuenta el consentimiento del paciente cuando sufre una enfermedad mental severa, por la cual el paciente ha perdido la autonomía y la capacidad de decidir por sí mismo, cuando el paciente representa un peligro para sí mismo o para otros, o cuando existe una posibilidad razonable para tratar el trastorno en un medio hospitalario. Este tipo de internación tiene como finalidad el brindar un tratamiento para evitar daños irreversibles y apoyar para que el paciente recupere su autonomía. En este sentido se puede afirmar que la internación compulsiva solo puede realizarse cuando el paciente está incluido en los criterios mencionados anteriormente. Si el paciente no se encuentra incluido en los criterios, pero que por algún motivo no puede dar un consentimiento válido para la internación, se debe recurrir a un familiar o representante legal para que sea este quien dé el consentimiento válido.
Bibliografía
Franca-Tarrago, O. (2000). Etica para psicologos - introduccion a psicoetica.