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Universidad de La Salle

Ciencia Unisalle

Maestría en Agrociencias Facultad de Ciencias Agropecuarias

2015

Caracterización de sedimentos producidos en una explotación


intensiva de trucha arco iris Oncorhynchus mykiss Walbaum,
1792, como un medio para definir estrategias de uso y manejo
sostenible de lagunas de oxidación en piscicultura
Julio Alberto González Acosta
Universidad de La Salle, Bogotá

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Citación recomendada
González Acosta, J. A. (2015). Caracterización de sedimentos producidos en una explotación intensiva de
trucha arco iris Oncorhynchus mykiss Walbaum, 1792, como un medio para definir estrategias de uso y
manejo sostenible de lagunas de oxidación en piscicultura. Retrieved from https://ciencia.lasalle.edu.co/
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Caracterización de sedimentos producidos en una
explotación intensiva de trucha arco iris (Oncorhynchus
mykiss Walbaum, 1792), como un medio para definir
estrategias de uso y manejo sostenible de lagunas de
oxidación en piscicultura

Julio Alberto González Acosta

Universidad de La Salle
Facultad de Ciencias Agropecuarias

Bogotá, D. C., Colombia

2015
Caracterización de sedimentos producidos en una
explotación intensiva de trucha arco iris (Oncorhynchus
mykiss Walbaum, 1792), como un medio para definir
estrategias de uso y manejo sostenible de lagunas de
oxidación en piscicultura

Julio Alberto González Acosta

Tesis presentada como requisito parcial para optar al título de:

Magíster en Ciencia Animal

Director:
Biólogo Marino, MSc. Rafael Rosado Puccini

Línea de investigación:
Ambiente y Sustentabilidad

Universidad de La Salle
Facultad de Ciencias Agropecuarias

Bogotá, D. C., Colombia

2015
DIRECTIVAS

HERMANO CARLOS GABRIEL GÓMEZ RESTREPO F.S.C


RECTOR

HERMANO FABIO CORONADO PADILLA F.S.C.


VICERRECTOR ACADEMICO

HERMANO FRANK LEONARDO RAMOS BAQUERO F.S.C.


VICERRECTOR DE PROMOCION Y DESARROLLO HUMANO

HERMANO MANUEL CANCELADO JIMENEZ F.S.C.


VICERRECTOR DE INVESTIGACION Y TRANSFERENCIA

DOCTOR EDUARDO ANGEL REYES


VICERRECTOR ADMINISTRATIVO

DOCTORA PATRICIA INES ORTIZ VALENCIA


SECRETARIA GENERAL

DOCTORA CLAUDIA AIXA MUTIS


DECANA FACULTAD DE CIENCIAS AGROPECUARIAS

DOCTOR ALEJANDRO TOBÓN GONZÁLEZ


SECRETARIO ACADEMICO
FACULTAD DE CIENCIAS AGROPECUARIAS
Página de aceptación

________________________________

________________________________

________________________________

________________________________

________________________________
Dr. Rafael Rosado Puccini
DIRECTOR

________________________________
Dr. Yimy Herrera
JURADO

________________________________
Dr. Jorge Triana
JURADO

________________________________
Dr. Alexander Umaña
JURADO
DECLARATORIA DE ORIGINALIDAD

Yo, JULIO ALBERTO GONZÁLEZ ACOSTA, certifico como autor de este trabajo
de tesis y como primer autor de las publicaciones resultantes, que soy el autor
principal en los procesos de diseño y aplicación del estudio aquí presentado y de
igual manera en la fase de análisis de los resultados y la preparación de los
manuscritos. Expreso que la información que se derive de los artículos publicados
y no publicados producto del trabajo de los demás, ha sido detalladamente
reconocida dentro del texto y en las citas que aparecen en la bibliografía. Doy fe
que la presente tesis no ha sido sometida a evaluación ni ha sido presentada en
otra institución de educación superior.
DEDICATORIA

A mi madre Julia Elvira por creer firmemente en la educación

A mi esposa Luz Dary por todo el apoyo incondicional brindado

A mi hijo Pedro Julián, por inculcarme alegría para seguir adelante


AGRADECIMIENTOS

A la Universidad de La Salle por el apoyo becario ofrecido, Al Dr. Rafael Ignacio


Pareja, en su momento Director del Programa de Zootecnia, por el estímulo y
apoyo incondicional brindado.

El constante apoyo y las orientaciones dadas por el Biólogo Marino Rafael Rosado
Puccini, desde la misma idea del anteproyecto de tesis cuando inicié la maestría,
fueron fundamentales en todo el arduo proceso que conlleva el realizar y escribir
una tesis de grado a nivel de maestría.

Mauricio Federico Ospina, compañero de maestría, quien dispuso siempre de


tiempo y dedicación, tanto en el aula de clase como en la parte práctica de esta
tesis. Fue fundamental para el entendimiento y realización de varias tareas que
involucraban el manejo de complejos programas computacionales.

En la orientación metodológica del proyecto, surgieron opiniones valiosas y que


aportaron significativamente, como las realizadas por Dra. Liliana Betancourt,
Universidad de La Salle; Dr. Luis Gabriel Quintero, Universidad Nacional de
Colombia y Dr. Yimy Herrera, Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia.

En lo referente al manejo de muestras, tipo de análisis para sedimentos y en


general todo lo relacionado con la interpretación de los datos, el Laboratorio Dr.
Calderón merece un reconocimiento especial por los análisis puntuales y el apoyo
económico dado a las labores académicas; el aporte del Dr. Jorge Alberto
Sánchez del Instituto Geográfico Agustín Codazzi, fue fundamental en el
procesamiento de las muestras generales y la interpretación de los datos desde el
punto vista edafológico.

En el manejo estadístico de los datos, el apoyo del Biólogo Alberto Díaz Martínez
resultó importante. En la parte operativa para la toma de las diferentes muestras
de sedimentos, para la estimación de la población y las pérdidas por alimentación,
el apoyo del personal de la finca Truchas de La Sierra, como Miguel Forero y
David Bossio fue sin duda valioso. En general, a todas las personas que
colaboraron de una u otra manera para que el presente trabajo fuese culminado.

A todos ellos, mi sincero agradecimiento


RESUMEN

Para conocer la composición general y puntual de los sedimentos asociados al


afluente, laguna de oxidación y efluente de una granja piscícola de clima frío,
dedicada a la explotación de trucha arco iris, se realizaron tres muestreos con
diferencia de 45 días entre ellos. Para el análisis general de los sedimentos se
evaluaron los parámetros de Capacidad de Intercambio Catiónico CIC, calcio,
magnesio, potasio, sodio, fósforo disponible, saturación de bases, bases totales,
carbono orgánico, materia orgánica, relación carbono: nitrógeno y pH. Se presentó
diferencia significativa entre los sitios de muestreo para los parámetros de CIC,
fósforo disponible, saturación de bases, carbono orgánico, materia orgánica y
relación C:N.

Para el análisis puntual de los sedimentos se evaluaron los parámetros de pH,


nitrógeno total, nitrógeno amoniacal, fósforo total, fósforo como P2O5, sólidos
totales, acidez total, nitratos y nitritos. Hubo diferencias significativas entre los
sitios de muestreo solamente para los sólidos totales. Como complemento a los
dos tipos de análisis realizados a los sedimentos, se estimaron otros parámetros
como pérdidas por alimentación, espejo total de agua de la granja y población total
de la misma antes de cada muestreo realizado. Finalmente se dan algunos
lineamientos para mejorar la calidad del efluente, buscando reducir algunos
indicadores que apunten hacia la sostenibilidad ambiental en piscicultura de aguas
frías.

Palabras clave: sedimentos, análisis general, análisis puntual, granja truchícola.


ABSTRACT

For general and prompt composition of the sediments associated with the affluent,
oxidation pond and effluent of fish farm from a cold climate, dedicated to the
exploitation of rainbow trout, three samplings with 45 days difference between
them is conducted. For the general analysis of sediment parameters cation
exchange capacity CIC, calcium, magnesium, potassium, sodium, phosphorus
available, base saturation, total bases, organic carbon, organic matter, carbon
nitrogen ratio and pH were evaluated. Significant difference between sampling
sites for the parameters of cation exchange capacity CIC, available phosphorus,
base saturation, organic carbon, organic matter and carbon nitrogen ratio was
presented.

For prompt analysis of sediment parameters pH, total nitrogen, ammonia nitrogen,
total phosphorus, phosphorus as P2O5, total solids, total acidity, nitrates and nitrites
were evaluated. There were significant differences between sampling sites only for
total solids. Complementing the two types of analyzes to sediment, other
parameters like feeding loss, the total water surface of the farm and the total
populations of the same before each sampling conducted were estimated. Finally
some guidelines are given to improve effluent quality, seeking to reduce some
indicators pointing towards environmental sustainability in cold water fishculture.

key words: sediments, general analysis, prompt analysis, rainbow trout farm.
CONTENIDO
1. Aspectos de caracterización, manejo y disposición final de
sedimentos producidos por la actividad piscícola …..……...... 1
Resumen.……………………..……………………….………………. 1
1.1 Introducción.…………………………………………………..……….. 2
1.2 Sedimentos piscícolas……………………..…………………………. 3
1.2.1 Naturaleza de los sedimentos piscícolas......………….…………… 3
1.2.2 Textura ........................................................................................... 4
1.2.3 Materia orgánica .........................……………………………………. 5
1.3 Composición de sedimentos piscícolas……………………………... 8
1.4 Producción potencial de sedimentos …….………… ………........... 11
1.5 Manejo del sedimento ....…………………………………………….. 13
1.5.1 Generalidades ..................................……………………..………… 13
1.5.2 Estructuras para captura del sedimento.............………………...... 16
1.6 Alternativas de uso y manejo del sedimento.................................. 18
1.6.1 Actividades agrícolas........................................…………………… 18
1.6.2 Reparación de estanques .....................……………….…………… 21
1.6.3 Tratamiento de sedimentos......................................……............. 22
1.6.4 Sedimento en aguas abiertas .......................…………................... 27
1.6.5 Sedimento como acondicionador de suelos ................................. 28
1.7 Ciclos biogeoquímicos de nitrógeno y fósforo................................ 30
1.7.1 Nitrógeno en agua ........................................……………………… 30
1.7.2 Dinámica del fósforo...........................….…………………………... 31
1.7.2.1 Fósforo en agua..........................................….…………………... 31
1.7.2.2 Fósforo en suelo y sedimento...................... …...…………………. 32
1.7.2.3 Fósforo en estanques……………………..…………………………. 34
1.7.2.4 Fósforo en el alimento..……………………...……………………….. 37
1.8 Estudios sobre sedimentos en Colombia…..…...………………….. 41
1.9 Bibliografía ..........................................................………………….. 42
2 Caracterización general de los sedimentos producidos en 52
una explotación intensiva de trucha arco iris (Oncorhynchus
mykiss Walbaum, 1792) ………………………….........................
Resumen…………………………………………………………….. 52
2.1 Introducción………………………………………………………….. 52
2.2 Materiales y métodos………………………………………………. 53
2.2.1 Localización…………………………………………………………. 53
2.2.2 Material experimental ………………………………………………. 54
2.2.3 Datos experimentales……………………………………………….. 55
2.2.4 Análisis estadístico……………………………..….……………….. 57
2.3 Resultados……………….…………………………………………… 57
2.3.1 Caracterización general……………………………………………. 58
2.3.2 Pérdidas por alimentación…………..……………………………… 68
2.4 Discusión…….…………….…………………………………………. 70
2.5 Conclusiones….…….………………………………………………... 78
2.6 Bibliografía…………………………………………………………… 78
3 Caracterización puntual de los sedimentos producidos en 82
una explotación intensiva de trucha arco iris (Oncorhynchus
mykiss Walbaum, 1792) ………………………….........................
Resumen…………………………….………………………………... 82
3.1 Introducción………………………….……………………………….. 82
3.2 Materiales y métodos……………….……………………………….. 83
3.2.1 Localización………………………….………………………………. 83
3.2.2 Recolección de muestras………….……………………………….. 83
3.2.3 Manejo de las muestras………….…………………………………. 84
3.2.4 Datos experimentales………….…………………………………… 84
3.2.5 Análisis estadístico ...………………………………….……………. 85
3.3 Resultados ….………………………………………….……………. 86
3.3.1 Caracterización puntual……………………………………………. 86
3.4 Discusión…… ..…………………………………………………….. 92
3.5 Conclusiones ……………………………………………………….. 98
3.6 Bibliografía………………………………………………….……….. 99
LISTA DE FIGURAS
Pág.

Figura 1. Detalle del tubo muestreador de lodos…………………………….………54

Figura 2: Valores de Capacidad de Intercambio Catiónico CIC (cmoles/kg)


obtenidos en sedimento de afluente, laguna de oxidación y efluente.
……………………………………………………………..………………………………60

Figura 3: Valores de calcio (cmoles/kg) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente. ………………………………………………………..60

Figura 4: Valores de magnesio (cmoles/kg) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente. ………………………………………………………..61

Figura 5: Valores de potasio (cmoles/kg) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente. ……………………………………………………..…61

Figura 6: Valores de sodio (cmoles/kg) obtenidos en sedimento de afluente, laguna


de oxidación y efluente. ………………………………………………..….…………...62

Figura 7: Valores de fósforo disponible (mg/kg) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente……………………………………….……..63

Figura 8: Valores de saturación de bases (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente………………………………….………………….…..63

Figura 9: Valores de bases totales obtenidos en sedimento de afluente, laguna de


oxidación y efluente. ………………………………………..…………………..………64

Figura 10: Valores de carbono orgánico (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente………………………………….…………….……..…65

Figura 11: Valores de Materia Orgánica (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente. …………………………………………..…………...65

Figura 12: Valores de Relación C:N obtenidos en sedimento de afluente, laguna de


oxidación y efluente. ………………………………..……………………………..…....66

Figura 13: Valores de pH obtenidos en sedimento de afluente, laguna de oxidación


y efluente………………………………………………………………….…………..….67
Figura 14: Valores de granulometría de arena (%) obtenidos en sedimento de
afluente, laguna de oxidación y efluente………………………………………………67

Figura 15: Valores de granulometría de limo (%) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente………………………………………………68

Figura 16: Valores de granulometría de arcilla (%) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente…………………………………………...…68

Figura 17: Valores de pH obtenidos en sedimento de afluente, laguna de oxidación


y efluente ………………………………....…………………………………..………….87

Figura 18: Valores de nitrógeno total (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente…………………………………….............................88

Figura 19: Valores de fósforo total (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente………………………………….…………………...…89

Figura 20: Valores de fósforo total P2O5 (g/100g) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente………………………………………………89

Figura 21: Valores de sólidos totales (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente……………………………………….………….…..…90

Figura 22: Valores de acidez total (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente………………………………....……………..….....…90

Figura 23: Valores de nitratos (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente, laguna


de oxidación y efluente ……………………………………………………...............…91

Figura 24: Valores de nitritos (g/100g) (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente…………………………………………………....……91
LISTA DE TABLAS
Pág.

Tabla 1: Tipo de suelos según su contenido de materia orgánica, medida en


porcentaje de carbono............................................................................................ 6

Tabla 2: Caracterización de la composición de sedimentos de estanques


piscícolas ubicados en los departamentos de Casanare y Meta (Colombia)………9

Tabla 3: Valores máximos de metales pesados en lodos aceptados por la Unión


Europea …………………………………………………………….………………....... 19

Tabla 4: Características de lodos procedentes de diferentes procesos de


tratamiento.……………………………………………………….……………….…….. 24

Tabla 5: Valores promedio de fósforo disponible en agua y sedimento de afluente y


efluente en granjas de Casanare y Meta (Colombia)........................................... 35

Tabla 6. Nutrientes esenciales medidos en el estiércol de pescado………………39

Tabla 7. Valores Media ± DE del análisis general para sedimentos de afluente,


laguna de oxidación y efluente en la granja de producción…………………………58

Tabla 8. Valores Anova para grados de libertad, F y p del análisis general para
sedimentos de afluente, laguna de oxidación y efluente en la granja de
producción………………………………………………………………………………..59

Tabla 9. Estimación de la cantidad (g día-1) y proporción (%) del alimento no


consumido en canaletas de alevinaje de trucha arco iris…………………………...69

Tabla No. 10. Población estimada de individuos durante los muestreos


realizados......………………..…………………………………………………….……..69

Tabla No. 11. Valores media ± DE del análisis puntual para sedimentos de
afluente, laguna de oxidación y efluente en la granja de producción………………86

Tabla 12. Valores Anova para grados de libertad, F y p del análisis puntual para
sedimentos de afluente, laguna de oxidación y efluente en la granja de
producción………………..………………………………………………….…….….….87

Tabla No. 13 Estimación del espejo de agua y volúmenes de las unidades de


manejo….……….….…………………………….……………………………………....92
LISTA DE ANEXOS
Pág.

ANEXO 1: Valores de análisis general obtenidos en sedimento de afluente, laguna


de oxidación y efluente……………………………………………….………………..102

ANEXO 2: Valores de análisis puntual obtenidos en sedimento de afluente, laguna


de oxidación y efluente……………………………………….………………………..104
1. Aspectos de caracterización, manejo y disposición final de
sedimentos producidos por la actividad piscícola

Resumen
Toda actividad productiva deriva en algún tipo de impacto, cuya magnitud está
relacionada con el nivel en el que se desarrolla. El recurso hídrico es
especialmente sensible, lo que ubica a la piscicultura en un escenario no ajeno a
controversia y que genera posiciones sensibles. En este contexto y en lo que se
refiere puntualmente a la producción de truchas, existen consideraciones
adicionales, a tenerse en cuenta como las exigencias de la especie y la calidad de
agua que se requiere, que hacen que las explotaciones se localicen sobre
cuencas que se utilizan para la instalación de sistemas de acueducto destinados a
consumo humano; generalmente son producciones que se ubican en una escala
intensiva, donde la generación de sólidos es particularmente elevada.

El sedimento hace parte integral de la actividad piscícola y se define como la capa


superficial del fondo en estanques o en lagunas de oxidación; se forma por la
precipitación de sólidos en suspensión, nutrientes y partículas del suelo que están
en contacto con el agua. Se calcula que hasta un 20% del alimento utilizado en los
cultivos se transforma finalmente en sedimento.

Se convierte entonces en un imperativo del orden ambiental el que las granjas de


peces deban disponer estructuras para la recolección de los sedimentos que
generan. En estas áreas se busca un almacenamiento por tiempos variables, que
buscan promover y facilitar los procesos normales de degradación orgánica.
Actualmente en Colombia, las Corporaciones Autónomas Regionales (CAR´s) no
disponen de manuales de manejo en este sentido y el control se limita por lo
general a constatar la existencia de tales lagunas de sedimentación, en la mayoría
de los casos sin seguimiento de su eficiencia ni control sobre los esquemas de
manejo final de los sólidos.

Palabras clave: sedimentos, laguna de oxidación, manejo sostenible, piscicultura.

1
1.1 Introducción

La piscicultura impacta en el medio ambiente a través de tres procesos que, de


acuerdo con Buschmann (2001), se pueden resumir en: consumo de recursos,
procesos de transformación y generación de residuos finales. En la producción de
alimento para especies carnívoras como los salmónidos, en donde las exigencias
de proteína son de alto nivel, se genera una elevada presión pesquera sobre el
medio dada la necesidad de obtener materia prima para los concentrados.
También, la intervención intensiva derivada de prácticas acuícolas que no se
monitorean y controlan puede convertirse en un factor de degradación ambiental,
fundamentado esencialmente por la introducción de desechos como alimento no
consumido, heces y material particulado de variada naturaleza; se tiene
igualmente que una fracción de los nutrientes quedan disueltos en la columna de
agua, favoreciendo fenómenos de eutroficación.

En el mismo sentido, Milthon et al. (2011) determinan que para la actividad


piscícola, una de las principales preocupaciones de manejo se focaliza sobre los
efluentes, lo que, al ser ricos en nitrógeno y fósforo, impactan los cuerpos de agua
receptores con un incremento en la productividad primaria que acelera los
procesos de eutroficación. Como en otras actividades económicas, en la
acuicultura se producen desechos que deben requerir de otros servicios
ambientales para ser asimilados o reciclados; cuando no hay control se
compromete finalmente la sustentabilidad (Buschmann, 2001).

La sedimentación es un proceso continuo en los estanques de acuicultura y los


resultados provienen de factores tanto externos (p.e. erosión de la cuenca), como
internos (alimento no consumido, heces, fertilizantes orgánicos, plancton, entre
otros); estos últimos son las fuentes de materia orgánica en la fracción de sólidos
(Boyd, 1995). Con esta dinámica es lógico inferir que tan pronto como un estanque
es excavado y llenado, los sedimentos comienzan a acumularse en la zona de
fondo; en general, los datos disponibles indican las bondades sobre el beneficio
ambiental de su eliminación, si bien para su manejo se procura tener en cuenta
ciertas restricciones: a) no deben restaurarse completamente las condiciones del
fondo del estanque original, pues la parte inferior puede interceptar el nivel freático
y generar filtraciones laterales en áreas adyacentes, y b) la filtración puede impedir
el secado completo de lagunas y estanques (Gutiérrez y Malone, 2006). En la
remoción debe haber disposición responsable, pues en las zonas de fondo
algunos sedimentos se mezclan con el suelo subyacente y puede influir el
movimiento de materia orgánica y de nutrientes a través de la infiltración en el
suelo original; también es posible inducir una escorrentía turbia que afecte zonas
aledañas y otras actividades (Boyd et al. 1994). El sedimento desempeña un
importante papel en la dinámica global del ecosistema en un estanque y no difiere
sustancialmente de los suelos utilizados para la agricultura en sus características
físicas, químicas y mineralógicas. La diferencia radica en que el suelo del

2
estanque está continuamente inundado y el intercambio de compuestos entre los
dos ambientes, agua y sedimento, tiene efectos sobre la composición del agua
(Boyd, 1995).

1.2 Sedimentos piscícolas

1.2.1 Naturaleza de los sedimentos

Como se anotó, el sedimento puede definirse como la capa superficial del fondo
del cuerpo de agua; se forma constantemente por la sedimentación de sólidos,
nutrientes y otras partículas del suelo que están en contacto con el agua. En el
cultivo de peces, la interfase agua – sedimento es altamente dinámica y del nivel
de oxígeno y el pH dependen muchas reacciones e interacciones químicas, como:

• Con el carbono se forma metano (CH4), ácido carbónico (H2CO3) y dióxido de


carbono (CO2). Se trata de gases que afectan el medio ambiente acuático y,
por tanto, la producción piscícola; el metano, por ejemplo, es tóxico y los otros
gases acidifican el medio.
• El nitrógeno forma el amoniaco (NH+4), el que deriva en amonio (NH3), nitritos
(NO2) o nitratos (NO3). El amonio y el nitrito son compuestos altamente tóxicos
para los peces de cultivo.
• En ciertas condiciones, el azufre forma sulfuro de hidrógeno (H2S), gas más
tóxico que el monóxido de carbono (CO) en los sistemas acuáticos. También
puede formar ácido sulfúrico (H2SO4), acidificando el medio.

Los anteriores son apenas ejemplos parciales de la dinámica que puede darse en
un estanque, entre la columna de agua, el sedimento y la interfase (Yossa et al.
2011). Se tiene que la materia orgánica en granjas piscícolas debe ser asimilada
por el sistema para disminuir el impacto ambiental. En esta materia convergen
restos de alimento no consumido, organismos de origen animal y vegetal en
diferentes estados de descomposición, además de sus principales componentes
como carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, fósforo y azufre. En cualquier
caraterización de sedimentos se identifican aminoácidos, proteínas, grasas,
hidratos de carbono, fósforo no digestible y material inerte. La cantidad de
biosólidos generada es variable y depende de la calidad de la dieta, la
digestibilidad de los ingredientes, la eficiencia de la conversión alimenticia, las
prácticas de manejo y el estado sanitario de los peces. La cuantificación precisa
es un proceso complicado y por lo general se hace a través de monitoreos
químicos del efluente. En el enfoque nutricional se tienen en cuenta los
coeficientes de digestibilidad aparente (CDA), la eficiencia de retención de
nutrientes (ERN) y la cantidad de alimento no consumido. Los biosólidos y
nutrientes totales solubles se calculan sobre materia en base seca. Como los
ingredientes de los piensos y formulaciones de las dietas cambian, los valores de
CDA y ERN también lo hacen (Castledine, 1986).

3
El sedimento influye finalmente en la productividad de la unidad de producción
piscícola. Por la liberación gradual de nutrientes, lo que aumenta la productividad
primaria del sistema, también se controlan ciertas reacciones bioquímicas que
ocurren en el ecosistema acuático (Boyd et al. 2002). Chattopadhyay y Banerjee
(2005) lo reconocen y afirman que con la caracterización del sedimento en
estanques se dispone de elementos que pueden apoyar mejoras en la producción
de peces. Nitrógeno disponible, pH, fósforo y potasio se correlacionan
significativamente con la producción primaria de los estanques, reportándose que
contribuyen con hasta un 84% de la producción primaria neta en estanques
construídos sobre suelos lateríticos en Suramérica (Castledine, 1986). Se infiere
por tanto que del conocimiento de las características de los sedimentos dependerá
el diseño de un sistema de gestión de residuos sólidos en acuicultura (Palmer,
1993) pues, a diferencia de los solubles, los nutrientes unidos a biosólidos pueden
ser removidos por sedimentación. En tal gestión puede darse, además de los
elementos de tipo ambiental, un componente económico adicional con beneficios
para el mismo piscicultor (Yuvanatemiya y Boyd, 2006).

1.2.2. Textura

En piscicultura tropical se busca trabajar con suelos lo más impermeables posible,


con textura fina, mas del 30% de arcilla y menos del 5% de materia orgánica
(Boyd, 1995). Una vez establecido el sistema de cultivo se inicia el proceso de
sedimentación, siendo este un receptor de elementos que no permanecen fijos en
el suelo y son reciclados por agentes biológicos y químicos, jugando entonces un
importante papel en aspectos ambientales. Según Jayaraj et al. (2008), el tamaño
de las partículas que componen el sedimento determina, entre otros, la textura del
fondo del estanque, la fauna que allí habita, la capacidad de retención de residuos
de otros procesos metabólicos, como amonio y fosfatos, y la afinidad de absorción
para sustancias que normalmente son adicionadas al estanque como cal, abonos
y fertilizantes.

Las características macro de los desechos acumulados en el fondo del estanque


pueden ser detectadas mediante análisis granulométrico (textura al tacto,
tamizado y sedimentación). Los tiempos de sedimentación varian entre menos de
1 min para arenas y entre 1 min y 2 h para los limos; una vez estos se hayan
sedimentado, las partículas que quedan en suspensión corresponden a la arcilla
(Callisto y Esteves, 1996).

De acuerdo a Brady (1990), el suelo de fondo en estanques no removidos


(cultivados con bagre canal y con carpa común) no difiere mucho, en lo que
corresponde a composición en porcentajes de arena, limo y arcilla, cuando se
compara con la de estanques originales removidos y cultivados con las mismas
especies; no obstante, en estanques removidos se presentan mayores porcentajes
de arcilla y menores porcentajes de arena.

4
La densidad de las partículas depende de la composición química y de la
estructura cristalina de las partículas minerales, variando típicamente entre 2,60 y
2,75 g cm-3 en suelos minerales (Brady, 1990). En suelos de fondo no removido y
removido, la densidad de partículas osciló entre 2,65 y 2,84 g cm-3 y la eliminación
de los sedimentos no influyó en la magnitud del parámetro. La densidad aparente
depende de la compactación, pero tiende a disminuir a medida que el promedio de
tamaño de partículas es menor; esta es mayor para el fondo húmedo de los
estanques removidos que para el de los no removidos.

1.2.3 Materia orgánica


En definitiva, la materia orgánica (MO) en estanques de cultivo se genera por la
acumulación de elementos como alimento, abonos, fertilizantes y por los que
produce el sistema mismo, como heces de animales, desechos metabólicos,
bentos, plancton, hongos y bacterias que, sumados a las partículas del suelo
erosionado, configuran al sedimento y lo tipifican; en la caracterización se tiene
que:

• Depende del origen del suelo, cantidad y calidad del alimento suministrado y
de las condiciones climáticas. En climas tropicales, la temperatura favorece el
crecimiento de bacterias que mineralizan la materia orgánica de la columna de
agua y en la interfase agua-sedimento; es normal que, conforme avanza el
tiempo, se pierda profundidad efectiva de estanques y lagunas de oxidación.

• Cuando no hay un manejo adecuado del sistema en las partes más profundas,
la capa de materia orgánica aumenta, las bacterias actúan en ausencia de
oxígeno y no la mineralizan; se acumula entonces, formando una capa gruesa
y fangosa de color oscuro que, además, genera gases como sulfuro y metano,
perjudiciales para la producción y para el medio ambiente (Yossa et al. 2011).

El sedimento bruto contiene entre 5 - 15% de materia seca, con una composición
de MO variable (50 a 70%). En cada kilogramo de lodo se han determinado hasta
5 g de nitrógeno, 2 - 10 g de fósforo y 0,3 g de potasio, composición que lo habilita
como un interesante producto para uso potencial en agricultura (Breton, 2007).
Yossa et al. (2011) reportan que en estanques piscícolas ubicados en la región
colombiana de los Llanos, un rango de materia orgánica entre 3,9 y 7,5%; de
acuerdo con la clasificación establecida por Boyd (2008), serían estanques
propensos a crear zonas anaeróbicas, con niveles de MO aceptables para
producciones con especies de clima cálido en las que se combinan el uso de
alimento comercial y la fertilización; sin embargo, los datos encontrados por Yossa
et al. (2011) indican que la MO estaría en proceso de mineralización por haber
sido inferior al 10%; también puede significar que la MO descargada al ambiente
fue inferior a la que ingresó con el afluente.

5
La MO generalmente se deposita en la parte inferior del suelo de fondo y es
descompuesta por microorganismos en carbohidratos, proteínas y otros
componentes celulares de rápida degradación; ciertos elementos presentan una
mayor acumulación por su lenta degradación y, por lo general, por su mayor
tamaño hay una resuspensión más o menos continua de partículas, a la que se
suma la ocasionada por la agitación superficial de los sedimentos por los peces y
otros organismos; en la capa superior de los sedimentos se tiene entonces una
mezcla uniforme (Munsiri et al. 1995). Es común encontrar una capa de MO fresca
en el sedimento superficial, la que no ha sido completamente mezclada, habiendo
por tanto una mayor concentración en esta parte.

Las partículas gruesas del suelo son suspendidas por la erosión interna, pero se
asientan cerca de los bordes, mientras que las partículas más pequeñas tienden a
establecerse en las zonas más profundas (Boyd, 1995). La MO orginada por el
plancton muerto, abonos, alimento no consumido y las heces, se depositan y hay
una mezcla continua con las partículas del suelo; en los estanques se favorece por
tanto la descomposición microbiana de MO (Boyd y Tucker, 1998). Ayub et al.
(1993) determinan que detritos orgánicos son descargados cuando hay drenaje
debido a la cosecha; después, los fondos normalmente son secados, lo que
mejora la aireación del suelo, acelerando la descomposición de la fracción lábil de
la MO. Se considera que la concentración de MO del suelo de fondo o sedimento
es difícil de evaluar, pues hay diferentes clases.

Los suelos orgánicos tienen alta concentración de material vegetal, muy


resistentes a la descomposición; estos suelos orgánicos tienen entre el 15 a 20%
de carbono orgánico (MO entre 30 y 40%), lo que los limita para actividades
acuícolas. Aquellos con menor cantidad de MO se conocen como suelos
minerales, calificándose como “lábil” si los microorganismos la pueden
descomponer fácilmente o “refractaria” si la descomposición es lenta. En los
métodos para analizar MO en suelos no se distingue entre restos vegetales
grandes o pequeños y sólo se reporta como la concentración total de la materia
orgánica. Suelos con MO del 10 % pueden ser aceptables para la acuicultura en
estanques, si la mayor parte de esta es refractaria, pero inaceptable si es lábil
(Boyd et al. 2002). Se establece la siguiente clasificación en suelos:

Tabla 1. Tipo de suelos según su contenido de materia orgánica, medida en


porcentaje de carbono.

Contenido de carbono (%) Tipo de suelo y características


<1 Suelo mineral, baja materia orgánica
1a3 Suelo mineral, moderada materia orgánica
3,1 a 15 Suelo mineral, alta materia orgánica
> 15 Suelo orgánico, con zonas anaeróbicas
Fuente: adaptado de Boyd et al. (2002)

6
En la MO del suelo hay aproximadamente un 45 - 50% de carbono orgánico, pero
la MO total rara vez supera el nivel del 5% (Nelson y Sommers, 1982). En
estanques acuícolas existe fuerte relación entre el carbono orgánico tomado de la
capa superior del suelo de fondo (a 5 centímetros de profundidad) y la tasa de
consumo de oxígeno por los microorganismos durante la descomposición de la
MO. La tasa respiratoria sólo se mide en microorganismos aerobios, aunque los
anaerobios también actúan en la descomposición; así la determinación de carbono
orgánico del suelo es un buen indicador del potencial aeróbico de la microbionta y
su actividad en el fondo del estanque (Xinglong y Boyd, 2006). Conforme pasa el
tiempo y el uso reiterado de la unidad productiva, el incremento en la
concentración de MO en el fondo pueden provocar condiciones anaeróbicas en la
capa superficial del suelo y afectar la interfase suelo-agua. En suelos anaeróbicos
no se eliminan eficazmente el fósforo del agua ni sustancias tóxicas reducidas,
tipo nitritos y sulfuro de hidrógeno; estos pueden incorporarse al agua del
estanque si en la interfase hay condiciones anaeróbicas. Así, uno de los
principales factores considerados como fuente de contaminación en acuicultura es
la acumulación de materia orgánica en los estanques (FAO, 2010); el
enriquecimiento de nutrientes en los efluentes es el el segundo efecto ambiental
de la actividad sobre el ecosistema.

En el caso de cultivos en jaulas flotantes la sedimentación de desechos sólidos


ricos en materia orgánica sólida es la principal preocupación ambiental para las
operaciones de cultivo. La degradación orgánica conduce al consumo de oxígeno
y a la producción de dióxido de carbono y de amoníaco, llegando a originar
entornos anóxicos (Magni et al. 2008). La disminución del OD y las elevadas
concentraciones de NH3 y H2S, pueden ser especialmente perjudiciales para la
biota bentónica. La concentración de MO en el suelo de estanques no aumenta
indefinidamente y cuando en las prácticas acuícolas se mantienen constantes
ciertos aspectos, como las especies cultivadas, la densidad de siembra,
fertilización, recambios, aireación y tratamiento del suelo, la entrada y degradación
de la MO también seguirá siendo aproximadamente la misma (Avnimelech et al.
1984).

Los estanques nuevos generalmente tienen poca materia orgánica en el suelo de


fondo; Boyd (1995) define que, luego de cuatro o cinco cosechas, la MO alcanzará
una concentración lo suficientemente alta como para que la tasa anual de
descomposición sea equivalente a la tasa anual de entrada de MO; se llegará a un
equilibrio y la concentración de materia orgánica en el suelo de fondo se podrá
mantener en los mismos valores año tras año (Boyd, 1995). Con base en datos
obtenidos en Estados Unidos, se determinó que la acumulación de MO y de
nutrientes es marcada en las capas superiores de los perfiles de suelo de los
estanques, aumentado la densidad aparente conforme se incrementa la
profundidad; estos resultados sugieren que la remoción de los sedimentos debería
mejorar la calidad del suelo inferior. El carbono orgánico, nitrógeno total, fósforo
total, concentración de calcio, magnesio y sodio en el suelo fueron mayores en los

7
estanques con suelos removidos que en aquellos en que no se hizo tratamiento
alguno.

Munsiri et al. (1995) encontraron que ciertos nutrientes y la MO se acumulan con


mayor fuerza en la parte superior del sedimento, entre la franja de 10 a 20
centímetros de profundidad, capa que es mayormente eliminada durante la
remoción; Steeby et al. (2004) determinan que la concentración de carbono
orgánico presente en sedimentos de estanques con bagre de canal, varió entre
0,76 y 3,43%. No observaron relación entre la concentración de este y la edad del
estanque o la intensidad de la producción. Por ejemplo, las menores tasas de
secuestro de carbono se han encontrado en estanques con camarón de agua
dulce (28 g m-2 año-1) y estanques de ceba del minnow fish (57 g m-2 año-1), ambos
con baja producción. En estanques de alta producción con el bagre Clarias sp. no
existen índices muy altos de secuestro de carbono (64 g m-2 año-1) y las más
elevadas se han medido para estanques de tilapia, con 264 g m-2 año-1, y de
carpas, con 240 g m-2 año-1, lo que se explica tanto por la construcción de nidos
por las primeras, como por los hábitos alimenticios de las segundas. Se tiene que
los estanques para acuicultura secuestran solo el 0,21% de la tasa anual de
carbono que, aún siendo un valor bajo, puede actuar como un significativo
sumidero de emisiones de carbono, lo que podría ser utilizado por la actividad
acuícola en la forma de créditos para aspectos de reducción de impactos por esta
causa (Boyd et al. 1997).

1.3 Composición de sedimentos piscícolas


En el país la línea de trabajo con sedimentos está poco representada y los
referentes disponibles son, en consecuencia, escasos. Entre los más completos y
recientes se encuentra el de Hernández et al. (2009), realizado sobre granjas de
cultivo con cachama blanca (departamentos de Casanare y Meta); como trabajo
pionero, ofrece una primera aproximación a la aplicación de métodos para este
tipo de caracterizaciones en el país, además de suministrar datos provenientes
directamente tomados sobre explotaciones nacionales; un resumen de los
reportes se presenta en la tabla 2.

8
Tabla 2. Caracterización de la composición de sedimentos en estanques
piscícolas ubicados en los departamentos de Casanare y Meta (Colombia).

Centro Yavir (Villanueva, Las Palomas (Lejanías,


piscícola Casanare) Meta)

Parámetro Unidad de Media ± DE Media ± DE


medida
Materia % 1,62 ± 0,69 1,50 ± 0,65
orgánica
pH 5,74 ± 0,16 7,14 ± 0,10
P ppm 57,80 ± 17,89 78,34 ± 17,74
Al meq/100 g 0,16 ± 0,06 0,13 ± 0,03
Ca meq/100 g 3,33 ± 1,73 11,32 ± 4,82
Mg meq/100 g 0,39 ± 0,40 1,01± 0,63
K meq/100 g 0,15 ± 0,17 0,09 ± 0,03
Na meq/100 g 0,07 ± 0,04 0,05 ± 0,03
Cu ppm 2,08 ± 0,55 5,21 ± 1,65
Fe ppm 265,90 ± 110,89 60,27 ± 21,98
Mn ppm 5,14 ± 2,89 8,19 ± 4,68
Zn ppm 5,97 ± 1,98 1,43 ± 0,73
B ppm 0,99 ± 0,62 0,23 ± 0,16
S ppm 17,94 ± 4,04 42,16 ± 23,22
Fuente: adaptado de Hernández et al. (2009)

Para este caso, en las comparaciones no se encontraron diferencias significativas


en contenidos de materia orgánica (MO) y minerales, ni entre los muestreos ni
entre estanques de una misma granja; sin embargo, se determinaron diferencias
en parámetros como pH, contenido de fósforo, calcio, cobre, hierro, boro y azufre
entre las dos granjas. Destaca que los promedios de materia orgánica en los dos
sitios (1,62% y 1,5%), son bajos cuando se comparan, por ejemplo, con el nivel
que se presenta en los sedimentos de manglar o estuario (hasta un 40%). Cuando
el porcentaje de MO es menor del 10% se le califica como un sedimento mineral
en el que se disminuye la capacidad de intervenir en la inmovilización de metales
pesados, ya que actúa como agente complejante de algunos elementos. La
temperatura del trópico también puede influir en los bajos valores de materia
orgánica de los sedimentos, pues se aumenta la actividad microbiana lo que
produce una rápida mineralización del material orgánico, aún dentro de la columna
de agua (Ramírez y Noreña, 2004).

El valor de pH presentó diferencia entre las dos granjas, aunque en un rango que
puede considerarse como apto para la producción, lo que tiene especial
significado en el manejo de las unidades en tanto este influye en la solubilidad de
los minerales. Los resultados de calcio, magnesio, potasio y sodio se encuentran

9
disponibles como cationes de intercambio, que son adsorbidos en cargas
negativas de partículas arcillosas y materia orgánica; también puede intercambiar
con otros cationes en el agua circundante y están parcialmente disponibles en el
medio.

En ejemplos de otros países, Márquez (2005) y específicamente para granjas


chilenas, trabajó con el tratamiento que se da sobre lodos provenientes de lagunas
de oxidación, evaluando la capacidad de depuración de residuos que se generan
en el proceso productivo de las explotaciones (lodos), mediante digestión
anaerobia. Estos lodos están constituídos principalmente por restos de alimento
no consumido, excretas y orina. Se utilizó un reactor cilíndrico de acrílico, con
capacidad de 10 litros, bajo condiciones mesófilas a 33 oC. Concluye que es
posible tratar los lodos mediante digestión anaerobia, logrando un alto porcentaje
de remoción de la materia orgánica, con una eficiencia del 82% de demanda
química de oxígeno y 74% de sólidos volátiles. Otros resultados de la
investigación sugieren que estos muestran una relación C:N cercana a 30, lo que
les otorga en un alto valor como fertilizante orgánico una vez se hayan
estabilizado mediante este tipo de digestión, por tanto son aptos para ser
utilizados en suelos agrícolas, forestales y en la recuperación de suelos
degradados.

Los lodos estabilizados pueden obtenerse después de una digestión anaerobia o,


también, la biomasa se puede estabilizar después de someterse a aireación. El
término de lodos estabilizados significa básicamente que han tenido un proceso
de digestión intenso, en el cual los microorganismos entran a fase endógena y la
masa microbiana se convierte en su mayor parte a gases volátiles y células
muertas, con dos consecuencias favorables: la disminución de la masa de lodos y
la inactivación biológica de la masa microbiana. Al final contienen un 70-80% en
peso de células muertas o inactivas y un 20-30% en peso de material inerte como
arcillas, silicatos y aluminosilicatos.

En un seguimiento de largo plazo, Boyd (2002) analizó muestras de sedimento


que fueron recogidas a los 7, 20 y 30 años sobre en estanques con 35 años de
uso. Las muestras se tomaron a 8 cm de profundidad en estanques jóvenes, a 12
cm en los de vida intermedia y a los 26 cm en estanques considerados maduros.
La concentración de carbono orgánico en sedimento fue de baja a moderada
(14%) y la relación con el nitrógeno fue de 20:50. El fósforo aumentó con la edad
de los estanques y la mayor parte (78,9%) fue fracción orgánica; el azufre se
presenta en forma inorgánica como sulfuro de hierro. Parece que estos dos
parámetros se constituyen en los principales problemas que genera la
acumulación de sedimentos con el transcurso del tiempo. El sedimento blando
profundo interfiere con el manejo de estanques, sobre todo en las cosechas. La
alta concentración de fósforo presente en los estanques maduros puede contribuir
a la proliferación de fitoplancton denso; el sodio y el nitrato no aumentaron la tasa
de descomposición de la materia orgánica presente en el sedimento.

10
Gabr y El Alfy (2009) realizaron análisis bacteriológicos y de metales pesados
sobre sedimento de granjas piscícolas; en general, la media de bacterias siguió un
patrón similar a la media de bacterias observadas en el agua. Aeromonas spp fue
encontrada en bajo número en el sedimento (10 cfug-1); los estreptococos fecales
estuvieron prácticamente ausentes en el sedimento. A nivel de metales pesados,
se encontraon bajas concentraciones de cadmio, cobre, zinc y plomo. Según FAO
(1994), para la zona en la que se adelantó el estudio se reportan altos niveles de
metales pesados en los afluentes, pero un bajo nivel en el sedimento presente en
estanques de engorde. Estos metales se conservan por causa de que todos los
estanques son completamente drenados y secados luego de cada cosecha, para
luego ser rápidamente cultivados. Se concluye que el secado periódico del fondo
en cada cosecha, puede ayudar a eliminar la acumulación de metales pesados.

1.4 Producción potencial de sedimentos

En el país se tiene que las principales casas productoras de concentrados para


truchas calculan que, en media, sus referencias pueden ofrecer una conversión
alimenticia cercana a 1,3:1 para todo el ciclo. Sobre digestibilidad no se cuenta
con registros confiables obtenidos directamente, pero en el caso de Chile registros
indican que para la especie se tiene alrededor de un 85% (Hettich, 2004).

Por otra parte, el volumen de la producción anual nacional puede estimarse en


unas 8.000 – 10.000 t de truchas de consumo, nivel que se deduce por los
aproximadamente 35 - 40 millones de ovas embrionadas que ingresan por
importación cada año; estas son la base productiva en la casi totalidad de los
cultivos, en tanto la obtención y uso de semilla nacional tiene un carácter marginal.
Con esta producción se pueden generar cerca de 2.600 t de sólidos por año, cifra
que surge de una aproximación teórica, la que requiere ser recalculada bajo el
concepto de pérdidas por alimentación y digestibilidad del alimento ofrecido.

No obstante, para efectos prácticos se calcula que un 5% en peso del alimento


suministrado a los peces no es ingerido debido a pérdidas por manejo y que cerca
del 15% del consumido se transforma en heces; se estima así que por lo menos
un 20% del alimento suministrado llega a producir sedimento, lo que puede
corresponder, como se anotó, a unas 2.600 t año-1 para el nivel actual de
producción en el país. Este dato no incluye los sólidos en suspensión que
provienen normalmente de la fuente hídrica y que, al final, también serán
aportantes del sedimento producido. El alimento y sus nutrientes se pierden
básicamente por tres vías: alimento no consumido, calidad y tipo de alimento y por
el sistema de alimentación implementado (Vásquez, 2008). El alimento no
consumido por los peces se estima en 2% para alimentos extruidos y 9% para
alimentos peletizados.

11
Salazar et al. (2005) estiman que por cada tonelada de salmón producido se
puede generar 1,4 toneladas de lodo, nivel que evidencia la necesidad de explorar
alternativas para su destino y uso. Blanco (1995) cita que una granja truchícola
que produzca 150 toneladas anuales de peces de consumo, estaría generando
cerca de 50 toneladas de sólidos y, Arroyo (1983), en un dato similar establece
que un centro truchícola en Europa que produzca anualmente 100 toneladas de
carne puede generar hasta 25 toneladas de lodo seco.

En documentos rectores sobre manejo ambiental en piscicultura en Chile (Ecoing,


2009), se propone la aplicación de estos lodos en suelos con aptitud
silvoagropecuaria, con el fin de impedir que la falta de manejo origine efectos
adversos significativos de suelos, cultivos, ganadería, fauna y flora silvestre, aguas
superficiales y subterráneas. Las guías de manejo se enfocan a lodos generados
en los procesos de limpieza, recirculación y filtrado de las aguas en piscicultura de
agua dulce, incluyendo los que se obtienen después de procesos de
concentración, floculación o estabilización. Estos trabajos presentan una
cualificación y cuantificación de los residuos asociados a lodos en cultivos de
salmónidos. Los lodos generados durante los ciclos corresponden principalmente
a material fecal y restos de alimento no consumido y, como se mencionó, por cada
tonelada de pez producido se generan entre 1,4 a 1,8 t de lodo.

Cho (2006) menciona que la optimización en el método de alimentación es un


factor clave para reducir la generación de sedimentos en estanques y lagunas de
oxidación. Bock et al. (2006) afirman que la baja digestibilidad en las dietas
suministradas a los peces incrementa la carga de los efluentes en los sistemas,
pues hay mayores contenidos de nutrientes en las heces; se concluye de forma
obvia que el sistema de alimentación en piscicultura tiene una relación directa con
la calidad del agua.

Analizando otro factor, el conocimiento de la relación entre la edad de un estanque


y la calidad del suelo resulta clave para indicar la sostenibilidad productiva de las
unidades a través del tiempo; alcanzar tal sostenibilidad, desde el punto de vista
de la actividad acuícola en general, tiene efectos complementarios en la
minimización de los impactos negativos sobre los recursos naturales y el medio
ambiente (Boyd y Clay, 1998). Una de las cuestiones clave radica en definir los
intervalos de tiempo en que los estanques puedan ser efectivamente utilizados,
antes de los cambios en la condición del suelo de fondo originen que la
productividad disminuya a niveles inaceptables. Es obvio también que existe una
diferencia fundamental entre las especies que se cultivan, el tipo de infraestructura
que requiere cada caso y, por tanto, las particularidades de manejo que se debe
adelantar sobre los sedimentos.

Se estima que el aumento en la profundidad del sedimento ocurre a una tasa


cercana a 1 cm año-1 en estanques acuícolas de investigación utilizados para
cultivo de Lepomis spp. e Ictalurus punctatus (Tepe y Boyd, 2002). La tasa de

12
aumento en la profundidad de sedimentos en estanques de ceba fue similar a la
de fase de levante; en tilapias, donde los peces perturban el fondo por
alimentación y construcción de nidos, la estimación de la vida útil que puede tener
un estanque dado se dificulta.

1.5 Manejo del sedimento

1.5.1 Generalidades

En términos ambientales, se asume que toda granja productora de peces debe


destinar un área especial para la recolección de los sedimentos originados, en
donde estos se almacenen por periodos de tiempo variable, de manera que se
permitan y faciliten procesos de degradación orgánica normal; en el país, el que
existan estas estructuras en las fincas, en principio, lo deben supervisar las
Corporaciones Autónomas Regionales (CAR´s), en su calidad de organismos
ejecutivos de las políticas ambientales nacionales. Estas instituciones, con base
en la legislación vigente, determinan que las lagunas de oxidación deben permitir
la retención del 80% de sólidos en suspensión, favoreciendo la absorción de
nitrógeno y otros excesos de nutrientes, a la vez que se promueva la decantación
de sólidos mediante el uso de plantas macrófitas.

Si bien es un criterio no necesariamente sustentado para la totalidad de los casos,


se considera que las lagunas deben tener un área cercana al 10% del espejo total
de agua que se utiliza en la explotación, con una profundidad mínima de 2 metros
y garantizando un tiempo de retención de 3 a 5 días. Se recomienda sembrar
especies como el buchón de agua (Eichhornia crassipes) y el helecho de agua
(Azolla filiculoides), las que, por su sistema radícular, logran disminuir la
concentración de sólidos y absorber nutrientes como nitrógeno y fósforo
(Departamento del Meta, Guía Ambiental Piscícola, 2007). Entre las especies más
utilizadas en el tratamiento de aguas, se citan al buchón de agua y al junco, con
los cuales se han obtenido porcentajes de remoción que varían entre el 70 y 90%
para nitrógeno y fósforo (Prieto, 2004). El volumen de las descargas que se dan
durante las cosechas se traducen en pulsos intermitentes pero elevados, por lo
que los criterios mencionados para las lagunas de sedimentación no
necesariamente garantizan su eficiencia; en casos de cosecha en climas cálidos,
la eficiencia puede ser incrementada si se descarga solamente la porción final del
estanque o laguna de sedimentación, lo que se explica porque los nutrientes se
concentran en este último sector (representa un 5 al 20% del volumen del
estanque) (Brinker y Rosca, 2005).

Los fertilizantes y el alimento que se aplican a los estanques acuícolas para


promover la producción de peces o camarones, normalmente no superan del 25%
al 30% del nitrógeno y fósforo requerido por los mismos. Durante la cosecha, tales
fertilizantes y piensos se pueden recuperar (Boyd, 2003). Los estanques tienen

13
una notable capacidad de asimilación de nitrógeno y fósforo mediante procesos
físicos, químicos y biológicos y por lo general tienden a tener mayor concentración
de nutrientes, plancton, sólidos en suspensión y demanda de oxígeno en su zona
de descarga. Por tanto, los efluentes del estanque son fuentes potenciales de
contaminación para los sistemas hídricos. En ese orden de ideas, varios países
implementan reglamentaciones para los efluentes acuícolas, con regulaciones
relativamente estrictas, por ejemplo, en Europa para el caso de jaulas flotantes. En
Australia se ha dispuesto de reglamentación para el cultivo de peces y camarones
en estanques y, en Estados Unidos, la Ley de Agua Limpia ha creado el Sistema
Nacional para Contaminación Por Altas Emisiones (NPDES), el cual ha permitido
que algunos estados la apliquen para los efluentes acuícolas. Algunos países
tropicales también han avanzado en regulaciones de efluentes de la acuicultura;
algunos ejemplos en América son Belice, Brasil, Ecuador, México y Venezuela.

Es común que los permisos de descarga sólo requieran de la aplicación de


prácticas específicas, llamadas Buenas Prácticas de Manejo (BPM), aunque en
algunos casos se incluyen otras normas complementarias. Dónde son válidas las
BPM se asume que debe existir una inspección para la verificación en la zona de
descarga; en varios paises los permisos de efluentes se exigen para algunas
operaciones de acuicultura. Se espera que la regla de los efluentes acuícolas que
se está desarrollando en los Estados Unidos pueda contener algunas normas
cuantitativas basadas principalmente en las BPM (Boyd y Hulcher, 2001); esto
seguramente será modelo para aplicación en otros países. La forma final del
efluente acuícola sigue siendo desarrollado por la Agencia USEPA en los Estados
Unidos y tiene efectos de largo alcance sobre las regulaciones gubernamentales
para la acuicultura en otros países. Por ejemplo, la erosión de estanques,
terraplenes, fondos y canales de descarga, que son una fuente importante de
partículas suspendidas del suelo hacia los efluentes y son la causa de
sedimentación en las aguas receptoras, deben ser controladas. Otras acciones
que minimizan las descargas de nutrientes en los efluentes y que deben
implementarse, son la selección de tasas de siembra y de alimentación que no
superen la capacidad de asimilación de los estanques; a nivel intensivo, la
aplicación de suficiente ventilación mecánica para evitar crónicamente la baja
concentración de oxígeno disuelto y así promover la nitrificación aeróbica natural
que ayuda a los procesos de purificación del agua; realizar en lo posible la
cosecha de los peces con drenaje parcial de los estanques y, finalmente disponer
de una laguna de sedimentación con vegetación acuática, antes que el agua
llegue a la zona de descarga o efluente.

Es un hecho que los efluentes de estanques acuícolas contienen nutrientes que


pueden causar eutrofización en los cuerpos de aguas receptoras (Boyd y Queiroz,
2001). Ozbay y Boyd (2003) mencionan que el papel fundamental de implementar
las Buenas Prácticas de Manejo Acuícola (BPMA) es, entre otros, reducir y
mejorar la calidad del efluente mismo. La mínima sedimentación de estanques se
considera un método de tratamiento de efluentes y es una vía para remover la alta

14
carga de sólidos suspendidos presentes en su 20 o 30% de trayecto final, cuando
el estanque es completamente drenado para cosecha. Adicionalmente, las cargas
pueden minimizarse mediante la aplicación de varios mecanismos, como a)
regular el uso de fertilizantes, b) manejo racional de cargas, c) calidad de los
piensos, d) practicas de alimentación, e) reducción de tasas de recambio, f)
sistemas de aireación, g) uso de fuentes adicionales, como aguas lluvias, h)
optimización de estructuras de salida, i) cosechas con drenaje parcial, j) uso de
laguna de sedimentación, y k) reutilización de agua.

Brinker y Rosch (2005) encuentran que el tiempo de residencia en sedimentación,


es el condicionante para definir el tamaño y el número de estanques necesarios
para tratar los efluentes. Definen que la sedimentación es eficiente en la remoción
de sólidos en suspensión pero no lo es para el nitrógeno, por lo que la decantación
es solamente una parte del tratamiento del efluente. Con base en el tamaño de las
partículas, concluyen que deben evitarse situaciones que fragmenten los sólidos
en suspensión, como la exagerada turbulencia que puede causarse por los
sistemas de aireación.

En climas tropicales la acumulación del lodo en lagunas anaerobias de oxidación


es rápida y puede oscilar entre dos a cinco años, con una variación de 0,3 a 0,4
m3 año-1 (Mara, 1976). Por tanto, la limpieza o dragado deberá ser realizada
cuando el volumen de lodo corresponda a un tercio o a la mitad del volumen total
de la laguna; o cuando se presente una acumulación cercana a 50 cm de lodo; se
vaciará el agua almacenada y se dejará secar el sedimento, antes de su posterior
traslado y uso. Pardo et al. (2006) hacen mención a nuevas técnicas que han sido
desarrolladas para el manejo de efluentes de la acuicultura (Texas Natural
Resource Conservation Commission); entre estas se destaca que el 25% final del
efluente del estanque sea dejado 48 horas en sedimentación antes de ser drenado
a la fuente, siempre y cuando la cantidad de sólidos en suspensión no exceda los
30 mg L-1.

En estanques de cultivo intensivo con camarón marino, la remoción de sedimentos


entre cosechas es una práctica común; estos sedimentos contienen sales y
aunque su disposición ocurre por fuera de los estanques, el efecto de las lluvias
sobre los acumulados pueden terminar salinizando el suelo (Boyd et al. 1994).
Sobre sedimentos y su remoción en estanques de agua dulce bien aireados, Boyd
(1998) afirma que los sedimentos no necesariamente deberían mostrar una gran
cantidad de materia orgánica, pues poseen básicamente minerales (95 a 98%) y
solo una pequeña fracción es materia orgánica (2 a 5%). La remoción empleando
agua en chorro dentro del estanque es una mala práctica, pues contamina los
canales o efluentes y los montículos de lodo pueden prevenirse mediante mejores
técnicas de aireación.

En Colombia, las granjas dedicadas al cultivo de truchas aplican aceptables


prácticas de alimentación, lo que es una consecuencia de los altos costos que

15
significa el concentrado por una parte y a la necesaria mitigación de impactos que
está siendo monitoreada, en diferentes grados, por las CAR´s en el país. De aquí
surge entonces la cuestión sobre la precisión real sobre el impacto ambiental que
generan las granjas productoras. Puede puntualizarse que básicamente el impacto
para este caso se supedita a la disposición y uso de los sedimentos de las lagunas
de oxidación de las explotaciones, aspecto que es especialmente relevante en
aguas frías que, por su calidad, son fuente preferencial para la instalación y
operación de acueductos dirigidos exclusivamente a consumo doméstico.

1.5.2 Estructuras para captura del sedimento


Sobre el diseño general de lagunas de oxidación, Saénz (1997) propone que estas
deben ser de forma cuadrada, con una profundidad adicional de 60 cm para la
eficiente acumulación de lodos provenientes de la actividad piscícola; sin
embargo, en la práctica, en la mayoría de las lagunas se ignoran aspectos
importantes como la forma, la ubicación del afluente y del efluente y facilidades
para la acumulación, manejo y remoción de lodos.

Blanco (1995) describe que, para aminorar la polución acuática derivada del
vertido directo de las aguas de cultivo de las truchifactorías, la legislación
española dispuso la obligatoriedad de instalar estanques, balsas de decantación o
lagunas de oxidación. Su superficie debe ser al menos del 10% del total de la de
los estanques y encontrarse situada de tal forma que recoja todas las aguas antes
de ser vertidas. Cuando las instalaciones albergan alta concentración de peces
por unidad de volumen, como ocurre en truchas, con reoxigenación natural o
artificial y estanques en cemento, especialmente preparados para eliminar los
sólidos de los fondos, estos criterios pueden no ser suficientes. El mismo autor cita
que en Dinamarca se sugiere que dicha instalación debe tener una forma
rectangular, dotada de tres compartimientos, siendo el compartimiento central en
donde se realiza la sedimentación, la velocidad del agua en los compartimientos
laterales debe limitarse y no que no exceda una velocidad de 2 a 4 cm s-1.

Con un criterio diferente, Beal y Laurel (1983) mencionan que un decantador o


laguna de oxidación localizada en la parte final de una explotación, requiere de
una gran superficie para optimizar los resultados. Establecen que es preciso
utilizar una superficie casi igual a la de los estanques y que se requiere un
volumen de tratamiento en una relación de 1 m3 por cada 1,5 m3 h-1de caudal; así,
un decantador final o laguna de oxidación con menor área es claramente
insuficiente para disminuir residuos hacia el medio natural. Para conseguir una
eliminación eficaz del fósforo, los lodos se deben evacuar periódicamente. La
decantación puede ser buena si el agua de salida se reparte bien por un estanque
de 4 metros de profundidad, seguido por otro estanque con profundidad de 1
metro y, finalmente, que el agua de salida pase por una cascada para asegurar
una previa reoxigenación antes de ser vertida.

16
Las lagunas deben trabajar con un flujo lento para promover un extenso tiempo de
permanencia y una elevada producción biótica. Para separar los complejos de
producción y aumentar su efectividad, Wedler (1998) menciona que idealmente se
debe construir 3 lagunas ubicadas en serie. En la primera se reciben las aguas
directas del proceso piscícola y a la segunda llegan las que son ricas en materia
orgánica; en estas hay dilución con agua del afluente y, finalmente, en la tercera
laguna se elimina el exceso de nutrientes con ayuda de plantas macrofitas.
Aunque no se hace mención a aspectos de área y forma de las lagunas, se afirma
que, sin mantenimiento, estas se saturan rápidamente y pueden convertirse en un
verdadero problema de tipo ambiental.

Boyd y Gross (1998), estudiando los efluentes de estanques acuícolas,


demuestran que las concentraciones de sólidos suspendidos totales, fósforo total,
turbidez, demanda bioquímica de oxígeno y nitrógeno amoniacal total que llegan al
medio, podrían reducirse a través de una adecuada sedimentación. La eliminación
del 75% o más de sólidos suspendidos totales y fósforo total, la reducción del 40%
en la demanda bioquímica de oxígeno y la turbidez, se produce dentro de las 8
primeras horas de colmatación. La eliminación de nitrógeno amoniacal es de un
nivel inferior a la del resto de las variables.

En algunos centros de producción pecuaria las plantas de tratamiento para aguas


servidas no son proyectadas para una eficiente remoción de nutrientes como
nitrógeno y fósforo. En algunas es práctica común el lanzar toneladas de lodos
provenientes de la unidad de tratamiento al cuerpo receptor más próximo,
generando graves impactos sobre el recurso hídrico (Stumm, 1992). En granjas de
cultivo de pequeña área es normal que no se disponga de espacio para la
instalación de una laguna de sedimentación (Schwartz y Boyd, 1994), por lo que
los monitoreos deben previamente determinar el tamaño de la partícula del
sedimento, materia orgánica presente, fósforo total, nitrógeno total y demanda
bioquímica de oxígeno, con el fin de determinar opciones para el manejo de los
efluentes. La lixiviación de nutrientes y descomposición se acelera con partículas
de pequeño tamaño. Sobre la base de estas características, los biosólidos
deberían ser retirados lo más rápidamente posible; pequeños núcleos fecales
quedan intactos si hay una rápida velocidad de sedimentación, pero cuando se
rompen en partículas más pequeñas requieren más tiempo para estabilizarse.
Como las partículas más pequeñas necesitan de una menor velocidad del agua
para depositarse en el fondo, el área disponible para una laguna de decantación
deberá ser mas grande para permitir una decantación efectiva (Olson, 1992).

En contexto, de lo anteriormente anotado se concluye que el conocimiento de las


características de los sedimentos se constituye en un precedente fundamental y
un requisito necesario para el diseño de un sistema de gestión de residuos
sólidos; los nutrientes unidos a los biosólidos pueden ser removidos por
sedimentación, mientras que para los nutrientes solubles esta opción no existe. La
importancia de minimizar la turbulencia para prevenir la descomposición y

17
resuspensión de biosólidos es también evidente. Un sistema de gestión
adecuadamente diseñado para desechos sólidos o sedimentos, no sólo es más
eficiente, sino que también puede resultar rentable para el acuicultor.

1.6 Alternativas de uso y manejo del sedimento


1.6.1 Actividades agrícolas

Chile produce alrededor de 500.000 toneladas anuales de trucha y salmón, lo que


lo posiciona como uno de los primeros productores mundiales de salmónidos; este
nivel ha obligado a que el país proceda con el fortalecimiento de una política
ambiental altamente responsable en la cual, entre otros, se considera el manejo
de los residuos sólidos generados por las explotaciones.

Teuber et al. (2007) evaluaron el efecto de diferentes dosis de lodos provenientes


de la crianza de salmones en el cultivo de papa y su efecto residual en la
gramínea Ballica anual. Los tratamientos se basaron en la adición de 50, 100 y
150 t ha-1; al final, entre los tratamientos no hubo diferencia significativa sobre la
producción total de papa (entre 45,6 y 47,5 t ha-1), también sin diferencias con el
tratamiento control (39,5 t ha-1). En el peso del tubérculo tampoco existió
diferencia, aunque sí en el número de tubérculos por planta. Ballica anual presentó
mejores rendimientos con el fertilizante. Los autores concluyen que los lodos o
sedimentos provenientes de granjas de salmón no afectan la emergencia ni el
desarrollo en cultivos de papa, si bien elevaron el nivel de fósforo y las bases de
intercambio del suelo.

En otra granja chilena se aplicaron lodos a una profundidad de 30 centímetros,


mezclando con suelos propios del sitio. Se encontró una mejoría en la fertilidad y
la actividad microbiana; los suelos no cambiaron significativamente con la
aplicación de estos lodos. En suelos degradados, se preservaron y mejoraron las
características de textura y la concentración de metales pesados presentes no
sobrepasó los niveles máximos permitidos. Concluyen que este tipo de lodos
presentan un alto contenido de materia orgánica y nitrógeno, que mejora las
condiciones del suelo y afirman que es posible aplicarlos sobre suelos degradados
con el fin preservar y mejorar sus características (Piscicultura Los Fiordos
Limitada, 2005).

Como se anotó anteriormente, Salazar et al. (2005) estiman que por cada tonelada
de salmón se producen 1,4 toneladas de biosólidos, poniendo en evidencia la
necesidad de buscar alternativas para su destino y uso; en esta magnitud se
constituyen en un grave problema ambiental al generar riesgos para la salud, para
los ecosistemas en general, llegando incluso a contaminar los suelos con
organismos patógenos. También en Chile, Celis (2007) reportó la aplicación de
biosólidos residuales de salmonicultura y demostró que estos pueden reciclarse
sin perjudicar los cultivos de maíz forrajero y las praderas de gramíneas; Teuber et

18
al. (2007) afirman que, si bien el reciclaje de los biosólidos acuícolas en suelos
agrícolas es factible, se requiere de valoraciones para su complementación con
fertilizantes inorgánicos, biodisponibilidad de metales pesados al suelo y a los
posibles efectos negativos a lo largo del tiempo.

Cuando se trabaja con biosólidos es importante tener presente que altas tasas de
aplicación pueden generar problemas de contaminación de aguas por causa del
fósforo (Teuber et al. 2007). El uso de biosólidos provenientes de cultivos con
salmónidos indican que las propiedades químicas del suelo no se ven afectadas
significativamente y sólo aumenta el fósforo y algunas bases al aplicar dosis más
altas (Salazar et al. 2005). En términos de biorremediación, la aplicación de
sólidos en suelos patagónicos evidenció un aumento significativo de la materia
orgánica y la agregación de partículas, indicando su buena calidad como
acondicionador. Dentro de las opciones de manejo para el sedimento producido
por decantación en plantas de tratamiento o lagunas de sedimentación, este
también puede ser utilizado para producir compost, junto con otros desechos de
piscicultura (Esturo et al. 2009). En la legislación europea se establece que para el
uso agrícola del lodo proveniente de lagunas de oxidación o plantas de
tratamiento, se deben controlar los niveles máximos permitidos de metales
pesados para que puedan ser utilizados en agricultura (tabla 3).

Tabla 3. Valores máximos de metales pesados en lodos aceptados por la Unión


Europea.

Unidad de Valor límite Valor límite


Parámetro
medida pH < 7 pH > 7

Cadmio ppm 20 40
Cobre ppm 1000 1750
Níquel ppm 300 400
Plomo ppm 750 1200
Zinc ppm 2500 4000
Mercurio ppm 16 25
Cromo ppm 1000 1500
Fuente: adaptado de Esturo et al. (2009)

En trabajos sobre integración entre acuicultura y agricultura, Stevenson et al.


(2010) evaluaron el agua y los biosólidos producidos en estanques cultivados con
tilapia nilótica (Oreochromis niloticus), bagre de canal (Ictalurus punctatus) y carpa
koi (Cyprinus carpio), y su posible aplicación en cultivos agrícolas de algodón y
cebada. Se tomaron en cuenta nitrógeno total, amonio, nitrógeno orgánico, nitrato,
fosfato, conductividad eléctrica, sólidos disueltos totales y pH. El agua del efluente
se caracterizó por su alto contenido de nitrógeno total y de amonio; este último

19
probablemente no es retenido en lodos del fondo y se fija por las algas en forma
de nitrógeno orgánico. En esta integración con tierras áridas se demostró su
efectividad ambiental, al reutilizar agua y reducir los costos de fertilizantes; el
efecto positivo al irrigar cultivos con aguas de efluentes fue el aumento de la
producción agrícola, especialmente con aguas conteniendo material de sedimento
con altos niveles de nitrógeno total y NO3. La aplicación de biosólidos
deshidratados no compite con el uso de fertilizantes. Los indicadores más notables
del estudio fueron el contenido de nitratos en las plantas (no de fosfato), la altura
de las plantas y los nudos por planta de algodón (Stevenson et al. 2010). En
general, para esta clase de integraciones, la reducción en el uso de fertilizantes
osciló entre 34 y 53%; la mejora en la fertilidad y la biodiversidad de suelos fueron
aspectos positivos desde una perspectiva ambiental.

Los residuos sólidos de la industria acuícola aplicados a tierras agrícolas incluyen


lodos recogidos de estanques o lagunas de sedimentación y los sólidos
deshidratados o secos derivados de la suspensión y retiro de estanques de
sedimentación u oxidación. Olson (1992) menciona que los lodos o sedimentos
provenientes de salmonicultura se pueden utilizar como recuperadores de suelo.
Estos deben ser estabilizados para su uso, teniendo en cuenta criterios como la
selección de sitios, descripción del suelo, características geológicas, topografía y
clima. Además, la descripción del proceso de aplicación debe darse en detalle
acerca de los procedimientos de prevención, pues hay casos en que se puede
causar una reducción de la productividad del suelo o en la percolación del exceso
de nutrientes.

En Brasil, Glauco et al. (2009) realizaron ensayos de cultivos hidropónicos de


alfalfa, Lactuca sativa, para integrarlo a la crianza intensiva de Brycon cephalus,
con agua circulante entre los dos sistemas productivos. El agua proveniente de los
tanques de cría se condujo a un decantador en el cual los residuos sólidos fueron
removidos diariamente. Por tanto, los nutrientes disueltos en el agua residual que
fue utilizada para el cultivo hidropónico provenían de la dieta ofrecida y de las
excretas de los peces. Comparando los nutrientes disueltos en el agua residual
con los presentes en soluciones nutritivas comerciales, se observó que la mayoría
están presentes en similar cantidad, excepto en los que se refieren a las
concentraciones de calcio y magnesio. Es decir, la concentración de nutrientes
presentes entre los sistemas prácticamente no varió.

La planeación del uso de biosólidos en agricultura debe considerar aspectos como


la presencia de metales pesados, el tipo de tratamiento dado al biosólido, las
áreas agrícolas donde será aplicado, la tasa de aplicación en el suelo, el
transporte, manipulación, almacenamiento y aplicación y el seguimiento del suelo.
En Brasil, los lodos tratados provenientes de las plantas de aguas residuales
pecuarias son vendidos a los agricultores para su aplicación en cultivos de caña y
café (Tavares, 2003), lo que indica el potencial de mercado que ofrecen y su

20
articulación conceptual con los estamentos bajo los cuales se define una
sustentabilidad ambiental.

En la Guía Ambiental Piscícola (Departamento del Meta, 2007) se hace breve


mención sobre sedimentos de estanques, indicando que en su manejo el mayor
impacto radica en el posible deterioro del agua, anotando que para minimizar y/o
mitigar efectos de deterioro se recomienda:

• Manejo adecuado del alimento


• Adecuada práctica de fertilización de estanques
• Uso de lodos como fertilizante para cultivos agrícolas

La afirmación anterior sobre el uso de sedimentos o lodos como fertilizantes


agrícola no se sustenta con estudios específicos realizados en el país, pues no
existen suficientes registros sobre su composición química y biológica, de forma
que se pueda precisar y tipificar los casos en los que su uso sea posible en estas
actividades de producción. Se ha sugerido que los lodos pueden actuar mejor
como un acondicionador orgánico de suelos, buscando mejorar las condiciones
agronómicas en general.

Desde el punto de vista ambiental, el tratamiento a través de actividades de


lombricultura es una alternativa interesante y, por la naturaleza de su composición,
el sedimento no tiene restricciones sanitarias para ser aplicados, atendiendo a que
se transforman en lodos estabilizados. La práctica de lombricultura (o
vermicompostaje) permite además obtener beneficios adicionales en la forma de
biofertilizantes (humus de lombriz) de excelente calidad, inocuos y sin restricción
para uso agrícola. Estos procedimientos se implementan considerando pasos
secuenciales de incremento de la flora microbiana con aporte del sustrato
específico, el compostaje del lodo y finaliza con la fase de cría de lombrices
propiamente dicha (Basaure, 2009).

1.6.2 Reparación de estanques


En Colombia, la Asociación de Acuicultores de Los Llanos Orientales
(ACUIORIENTE, 2007), recomienda que, comprobado el nivel de lodos tanto en el
fondo de estanques como en lagunas de oxidación, estos se retiran y se pueden
redistribuir para la reparación de diques o, al igual que en casos anteriores, es
factible su utilización como abono orgánico.

Los sedimentos en los estanques de cultivo intensivo de camarón ubicados en el


sur de Tailandia se producen principalmente por la erosión del fondo debida a la
aireación que se suministra. El sedimento de naturaleza franca, contiene
minerales, arcilla, una alta concentración de materia orgánica y sin propiedades
tóxicas aparentes. La práctica común de remoción de estos después de cada

21
cosecha parece innecesaria, porque se generan costos y aparentemente ningún
beneficio. El sedimento se considera como un peligro ambiental porque las sales
que contiene son fácilmente retenidas por el suelo. Así, la recomendación de
manejo para este caso sería extenderlo por el fondo y diques erosionados y luego
compactarlo, minimizando así los efectos de la erosión (Boyd y Munsiri, 1994).

De acuerdo con Avnimelech et al. (1984) la aplicación de suelos de fondo o


sedimento se hace generalmente entre 5 a 10 centímetros de profundidad,
cuidando la textura del suelo receptor y utilizando arados de giro para mejorar los
suelos pobres. La aplicación superficial depende de si el suelo tiene
concentraciones no aceptables de uno o más elementos y se hará aplicación
profunda cuando los suelos son de mejor calidad. Las partículas de fondo inducen
la aireación en el suelo receptor.

1.6.3 Tratamiento de sedimentos

Como se ha anotado, en la composición de los sedimentos o lodos generados en


el proceso productivo de la actividad piscícola se encuentran principalmente
restos de alimento no consumido, excretas y orina (Basaure, 2009). Presentan,
por tanto, una alta concentración de materia orgánica y compuestos nitrogenados,
debido a los desechos metabólicos de los peces objeto de cultivo; en Chile se
clasifican dentro de la categoría de no peligrosos. En general, estos RILES
(Residuos Líquidos Industriales) son trasladados a un tratamiento primario, que
consiste en una o varias piscinas de sedimentación, que tienen como objetivo
principal la reducción de los sólidos decantables en suspensión. Es práctica
común para el tratamiento de lodos de pisciculturas el emplear canchas de
secado, aún cuando se generan graves problemas por causa de olores,
especialmente en zonas de baja temperatura ambiental. En otros casos, se
procede con su disposición final en pozos de tierra, pero con estos no se puede
tener control sobre vectores, gases y lixiviados producidos.

El objetivo de manejo ambiental se debe extender más allá de la adecuada


recogida de los biosólidos para lograr una reducción en el efluente, involucrando
también lo que corresponde al cumplimiento de las normas de calidad para las
aguas que son devueltas, incluyendo el manejo de sólidos, su secado,
almacenamiento, eliminación o control de olor, transporte seguro y limpio, la
selección y el diseño del sitio o laguna de oxidación, técnicas de aplicación,
selección del sitio, la compatibilidad de los cultivos, la hidrogeología y el tipo y
profundidad del suelo; estas son las consideraciones para la implementación y
aplicación responsable de un programa de gestión para los biosólidos producidos.
El objetivo más importante del uso de cualquier tipo de biosólidos es asegurar que
sus componentes nocivos no degraden la calidad de las aguas superficiales ni de
las subterráneas (Olson, 1992).

22
En general, los que son producidos en las operaciones de acuicultura se
consideran excelentes acondicionadores del suelo en cultivos agrícolas, jardines,
praderas, árboles y cultivos de flores. El mayor valor fertilizante de los biosólidos
se obtiene aplicando inmeditamente el material mientras está húmedo, pues con el
secado se produce volatilización y pérdida de algunos nutrientes, por lo que en
seco su valor fertilizante se reduce; aún así, todavía proporcionan humus, que es
un excelente acondicionador pues aumenta la retención de agua en el suelo. Los
biosólidos secos no afectan las plantas, incluso cuando se aplican en altas
cantidades; contienen alrededor del 4,2% de nitrógeno total en peso seco, además
de fósforo, potasio y micronutrientes en cantidades similares a otros biosólidos
pecuarios.

Rojas (2002) afirma que antes de su disposición final, los lodos deben ser
acondicionados a causa del contenido de materia orgánica susceptible de
putrefacción y se debe evitar que sean dispuestos libremente. El tratamiento de
las aguas de efluentes residuales produce subproductos, en la forma de lodos
retenidos en desarenadores y sedimentadores. En líneas generales se puede
indicar que los lodos que provienen de la sedimentación primaria representan
entre el 0,22 y el 0,93% del volumen de agua residual, con un contenido de sólidos
volátiles entre el 63 y el 83%. En el caso de los provenientes de la sedimentación
secundaria, se tiene que los que resultan de los filtros percoladores muestran un
rendimiento de 0,08 a 0,1% del caudal tratado, con un contenido promedio de
sólidos volátiles del 60%. Los lodos activados comúnmente presentan un
rendimiento del 1,2 al 1,5% del volumen de agua tratado, con un contenido de
humedad del 97 al 99% (ver datos de la tabla 4).

En los procesos típicos de manejo de lodos se tiene que la concentración se


consigue a través de espesamiento, digestión, acondicionamiento, deshidratación
o secado, incineración y oxidación. De éstos, la digestión, incineración u oxidación
por vía húmeda, son los más empleados para la reducción de la materia orgánica;
con la concentración, acondicionamiento y deshidratación se busca la eliminación
de la humedad. En esencia, el tratamiento de la materia orgánica busca:

• Reducción apreciable del contenido de la materia orgánica volátil


• Aumento del contenido de sólidos fijos
• Reducción del contenido de humedad
• Mayor posibilidad de drenaje del agua contenida en los lodos
• Producción de gases, principalmente metano

23
Tabla 4. Características de lodos procedentes de diferentes procesos de
tratamiento.

Tipo de lodo Aspecto Olor Secado % Humedad

Primario Fuerte Difícil 95,0 – 97,5


Pardo y pegajoso
Secundario
Ceniciento
Filtro biológico Medio Medio 92,0 – 95,0
Floculento
Lodo activado Marrón floculento Suave Difícil 98,5 – 99,5
Ceniciento
Precipitación química Fuerte Difícil 93,0 – 95,0
gelatinoso
Lodo séptico Negro Fuerte -
S.P. 87
Negro homogéneo F.B. 90
Lodo digerido Suave Fácil
granular L.A. 93
P.Q. 90
Fuente: adaptado de Rojas (2002)
S.P. Sedimentador Primario; F.B. Filtro Biológico; L.A. Lodo Activado; P.Q. Precipitación Química

El uso de microorganismos eficientes (EM) en la estabilización de lodos,


comprende una mezcla de microorganismos benéficos que crean un ambiente
negativo para patógenos y son efectivos degradadores de materia orgánica
(Fioravanti y Vega, 2003). Para determinar su eficacia, emplearon tanques
anaeróbicos con 1 m3 de lodo séptico cada uno y aplicando el 10% (v/v) de EM
activado. Los indicadores con el tratamiento con EM fue la reducción casi total de
coliformes totales, el cambio de olor de muy fuerte y putrefacto a un olor típico de
fermentación, la reducción de la demanda bioquímica de oxígeno, la reducción del
contenido de nitratos, la reducción del pH y temperatura, y la mayor reducción de
grasas y aceites. Se evidenció la eficacia de EM en la estabilización de biosólidos
acuícolas para su uso agrícola como abono.

Como los efluentes de las instalaciones acuícolas incluyen el alimento no ingerido,


las excreciones metabólicas, las heces y los peces muertos, en su composición se
encuentran tanto residuos sólidos como nutrientes orgánicos e inorgánicos. Si el
flujo de estos compuestos hacia el ambiente supera la capacidad de asimilación
de los ecosistemas, puede causar impactos severos tanto en la columna de agua
como en el bentos, tales como eutrofización, agotamiento de oxígeno y alteración
de la biodiversidad local (Sena – Ceniacua, 2010).

24
Con similitudes para cultivos continentales, en el caso de cultivos en agua marina
la magnitud del impacto ecológico dependerá de las condiciones físicas y
oceanográficas del lugar, temperatura del agua y capacidad de asimilación del
ecosistema, gestión de la granja, tamaño de la misma, densidad de cultivo,
duración de las operaciones de cultivo, digestibilidad de la comida y estado de
salud en general de los peces; un programa de manejo deberá incluir también la
incorporación de modelos de evaluación de impacto ambiental, basados en la
información diaria de operación en relación con la densidad de cultivo, tasa de
alimentación y variables abióticas (corriente de agua, profundidad, ciclos de marea
y vientos), relacionando la información con los ciclos bioquímicos de
descomposición de la materia orgánica, tanto en el agua como en el sedimento
(medición de nutrientes como nitrógeno, fósforo y materia orgánica). Lo anterior
para ser empleado en el análisis de comunidades biológicas antes y durante los
ciclos de cultivo, apoyados con el uso de software y SIG para monitorear las
variables (Báez-Paleo, 2008). De lo hasta ahora mencionado, se deduce que la
separación de heces y lodos en las aguas residuales acuícolas es una parte
fundamental de los procesos auxiliares de producción; se incluyen dentro de la
elaboración del diagnóstico ambiental, el muestreo y análisis de residuos y
vertidos. Como medida de minimización se cita la remoción de sólidos y
sustancias tóxicas en los sistemas de recirculación del agua a través de sistemas
de retención. Aunque se reconocen los lodos como un residuo propio de la
actividad acuícola, no se menciona nada sobre su manejo y utilidad.

Este proceso debe adelantarse en condiciones aerobias, pues las bacterias


aerobias son las que degradan el material biológico en productos estables; así, al
reactor biológico continuamente se le debe suministrar oxigeno, inyectando aire a
través de bombas especiales o por aireación superficial, pues existe demanda de
DBO por el sustrato, alimento de las bacterias; este puede convertirse
parcialmente en materia celular, razón por la cual debe extraerse periódicamente
para mantener el equilibrio, pues el aumento no controlado de la biomasa
colapsaría al sistema. Después de que el agua a procesar se encuentra durante
un determinado tiempo en contacto con los microorganismos o biomasa en el
reactor, fluye a un sedimentador secundario donde los sólidos o biomasa son
separados por decantación, y el efluente o agua procesada con bajo valor de DBO
puede ser empleada para ciertos usos, pero no como agua potable. De la parte
inferior del sedimentador son extraídos los lodos, los cuales en su mayoría son
reciclados y vuelven a alimentar el digestor, ya que esta es una masa biológica
activa que, por seguir consumiendo material orgánico, se logra su remoción
continua del agua que se procesa.

Los lodos que se deben extraer del sistema para mantener estable y constante la
biomasa o población de microorganismos, consisten esencialmente de células (70
-80% en peso) y material inerte (20-30% en peso). La masa microbiana no se
encuentra bien digerida o estabilizada, por lo que es enviada a un tratamiento
llamado digestión anaerobia. En este proceso se desarrollan otro tipo de bacterias

25
que digieren muy eficientemente el material orgánico residual, obteniéndose
finalmente los lodos residuales estabilizados; esto se logra luego de una digestión
anaerobia; también la biomasa se puede estabilizar después de una aireación en
la cual las células tienen un tiempo de residencia en el reactor entre 15 a 30 días,
como es el caso del proceso de lodos activados por aireación extendida. La
palabra lodos estabilizados significa que estos han tenido un proceso de digestión
intenso, en el cual la masa microbiana se convierte en su mayor parte en gases
volátiles y células muertas, lo cual tiene dos consecuencias favorables: la
disminución de la masa de lodos y la inactivación biológica de la masa microbiana
(Márquez, 2005).

En general, el manejo biológico de lodos consta de un reactor biológico o digestor


de materia orgánica, donde se encuentra una gran cantidad de microorganismos
responsables de consumir el material orgánico biodegradable, proceso que se
denomina tratamiento con lodos activados (Márquez, 2005). El término lodo se
debe a la semejanza con el fango y la referencia de activado se debe a que la
masa microbiana que forma estos lodos presenta una alta actividad biológica. El
material orgánico que entra desde el sistema de drenaje al digestor biológico es
medido como Demanda Bioquímica de Oxigeno (DBO); una parte del material
orgánico se convierte en masa celular y el resto es emitido a la atmósfera en
forma de gases (dióxido de carbón, vapor de agua).

La alta carga de sedimento externo puede rápidamente llenar un estanque y


reducir su volumen de agua, lo que se resuelve mediante un tanque de
sedimentación en el que se remueven sólidos antes de que ingresen a las
unidades; también la sedimentación en estanques puede ser ocasionalmente
dragada. El fondo de los estanques se desgasta naturalmente con el movimiento,
desde el suelo somero hasta las áreas más profundas del mismo. Después de
algunos años, usualmente el fondo de los estanques requiere mantenimiento y la
remoción del sedimento se hace obligatoria (Boyd, 1998).

En Brasil, los métodos de tratamiento de aguas residuales acuícolas se basan en


lodos activados y filtros biológicos, los cuales son suspensiones con contenidos de
sólidos que varian entre 0,5 y 1%. Según Tsutiya (2002) estos lodos requieren ser
estabilizados antes de que puedan ser dispuestos en el ambiente. El método de
estabilización más común en las plantas de tratamiento es la digestión anaerobia,
la cual convierte carbono orgánico en metano (CH4) y carbono inorgánico (CO2).
Cuando la digestión anaerobia se realiza en reactores con tiempos de residencia
superiores a 15 días y temperaturas entre 35 y 55 oC se promueve una
significativa reducción de organismos patógenos, lo que hace que los lodos
puedan ser utilizados en agricultura, como acondicionadores de suelos o como
proveedores de nutrientes para los cultivos cuando son aplicados correctamente.
A pesar de los costos que significa el manejo de los biosólidos, estos son
inferiores a los que significa la reparación por causa de la degradación ambiental,

26
lo que enfatiza que estos mecanismos se deben disponer dentro de las rutinas de
la operación acuícola (Olson, 1992).

1.6.4 Sedimento en aguas abiertas


Una nueva estrategia para el manejo en jaulas consiste de un equipo que
desplaza grandes volúmenes de agua rica en oxígeno, de forma constante, desde
la zona superior de la columna hasta el sedimento que se acumula bajo las
unidades que contienen los peces en cultivo. La operación se realiza con una
irrigación punto a punto, con una total cobertura del área objetivo, lo que aumenta
la cantidad de oxígeno disponible en el sedimento; esto permite su rápida
recuperación a través de procesos naturales, en un menor tiempo y con el mismo
resultado, en términos físicos, biológicos y químicos. En general se denomina
como el Servicio de Recuperación de Fondos (SRF) y, además de las ventajas
ambientales y de ajuste al cumplimiento de las normativas, se tiene la
recuperación de la capacidad de carga de la zona de cultivo (Panorama Acuícola,
2009).

Troncoso et al. (2007) evaluaron la factibilidad del tratamiento de los sedimentos


anaeróbicos ubicados bajo las jaulas de cultivo de salmones, empleando hidróxido
de magnesio (Mg(OH)2) para determinar su efecto sobre el pH, potencial redox,
materia orgánica total MOT (%), granulometría y abundancia de especies del
macrozoobentos. Los tratamientos con distintas dosis del producto (100, 250, 500,
1.000 y 2.000 g m-2) fueron adelantados en un centro de cultivo de salmones en
Chile, por un periodo de 11 meses. Los principales resultados permiten señalar
que el uso de este producto podría retornar el potencial redox de los sedimentos a
valores positivos, elevar el pH, reducir el porcentaje de MOT e incrementar la
abundancia de las especies presentes en el sedimento. Al final se recomendó su
aplicación en sedimentos anaeróbicos en dosis de 250 a 500 g m-2 de Mg(OH)2,
con una frecuencia de tratamiento de tres meses.

El aporte de sedimento que ocurre por la actividad piscícola que se lleva a cabo en
jaulas flotantes, originado por la descomposición de residuos acumulados del
cultivo, alimento y heces bajo las jaulas, afecta la calidad del agua, la ecología y la
salud del mismo sistema. Además, la incorporación de sedimentos se tiene de
forma natural por los ríos que llegan a los cuerpos de agua. Los sedimentos o
lodos depositados en el fondo generan procesos de acumulación con riqueza en
componentes biodegradables de interés para el subsector agroindustrial, como por
ejemplo en la elaboración de productos orgánicos como acondicionadores de
suelos (CAM, 2006). Además el proceso gradual de deposición de estos
materiales, colmata y disminuye la vida útil de los cuerpos. Para revertir la
situación y actuar en la recuperación de residuos de este tipo se tiene su
extracción y acondicionamiento como material compostable, mejorado para ser

27
utilizado en el sector agropecuario en la recuperación de suelos y utilización en
cultivos agrícolas regionales.

1.6.5 Sedimento como acondicionador de suelos


Los acondicionadores del suelo son recursos naturales con alta materia orgánica,
con importancia en la corrección de limitantes en las propiedades físicas, químicas
y biológicas de suelos con vocación agrícola. Se conoce como materia orgánica a
la acumulación de todos los residuos vegetales y animales, así como de las
células microbiales depositadas en el suelo y que se encuentran en proceso de
descomposición. La materia orgánica del suelo es importante como fuente de la
energía requerida para la actividad y el metabolismo de los microorganismos del
suelo y como sustrato para el suministro de algunos nutrientes esenciales para las
plantas (Gómez, 2000). Por estas razones la materia orgánica se constituye en la
fracción más activa y dinámica del suelo, incrementando su potencial productivo y
mejorando su actividad biológica. La materia orgánica incorporada al suelo, en
forma de abono orgánico o de residuos de producción animal, es importante pues
en esencia actúa como un acondicionador y mejorador de sus propiedades

Según Blanco (2002), dentro de las propiedades coloidales de la materia orgánica


se tiene el que protege el suelo contra la erosión, volviéndolo más poroso y menos
compacto; las moléculas de materia orgánica absorben 100 veces mas agua que
el polvo y pueden retener y luego liberar una proporción similar de nutrientes. Los
acondicionadores son materiales que se incorporan con la función primordial de
mejorar las condiciones físicas del suelo y varían según su origen y composición;
pueden ser sintéticos o naturales, orgánicos o inorgánicos y, aunque el tema no es
nuevo, recientemente se hace énfasis en el máximo rendimiento económico
(Hickman y Whitney, 1992). Los acondicionadores tienen gran variación en su
composición, tasa de aplicación y modo de acción. Las funciones de los productos
que pueden actuar como acondicionadores buscan en esencia (Klute, 1986):

• Mejorar la estructura y aireación del suelo


• Incrementar la capacidad de retención del agua
• Incrementar la disponibilidad del agua para las plantas
• Reducir las condiciones de compactación y dureza
• Mejorar el drenaje no efectivo
• Restaurar la alcalinidad del suelo
• Liberar algunos nutrientes disponibles
• Mejorar la incorporación de químicos
• Mejorar el desarrollo de raíces
• Elevar la calidad de la producción agrícola

Uno de los principales parámetros a controlar en un proceso de degradación de la


materia orgánica es la relación C:N, que es la fracción de carbono orgánico frente

28
a la de nitrógeno. Casi la totalidad del nitrógeno orgánico presente en un residuo
orgánico es biodegradable y esta disponible. Con el carbono orgánico ocurre al
contrario y una gran parte se engloba en compuestos no biodegradables. Se
considera que en un sedimento ideal para actuar como ser buen acondicionador
de suelos se debe presentar una relación de C:N de 30:1. Esta relación en la
materia orgánica superficial en el suelo, comúnmente se halla en un rango de 8:1
a 15:1, con un promedio de 10:1. La relación C:N de la materia orgánica agregada
al suelo es importante para la disponibilidad de del nitrógeno y la tasa de
descomposición de la materia orgánica. La competencia por disponibilidad del
nitrógeno en el suelo ocurre cuando la materia orgánica con una gran relación C:N
es incorporada al suelo. Yossa y Ortega (2013) analizaron esta relación en
sedimentos superficiales de granjas piscícolas ubicadas en los Llanos Orientales
de Colombia; encuentran relaciones entre 8:1 y 11:1 aproximadamente, sin
diferencias significativas entre los sitios evaluados. Teniendo en cuenta que los
valores obtenidos son mayores a los del fitoplancton (6,6), la materia orgánica
depositada en los sedimentos debe posiblemente provenir de material orgánico
alóctono.

Una práctica habitual en países desarrollados es la aplicación de sedimentos o


lodos residuales a suelos agrícolas (Banks, 2004). La dosis de aplicación se
establece en función del requerimiento de nitrógeno y fósforo de los cultivos.
Cuando los lodos son aplicados al suelo natural se observa:

• Mejora la fertilidad del suelo y el rendimiento de los cultivos


• Proporciona nutrientes elementales a las plantas
• Mejora estructura y porosidad del suelo
• Proporciona materia orgánica al suelo
• Mejora la permeabilidad del suelo, reteniendo en mayor grado la humedad
• Reduce la erosión del suelo

En Brasil los métodos de tratamiento para aguas residuales de diferente origen, se


basan en el uso de filtros biológicos para el manejo de lodos activados, que son
suspensiones con contenido de sólidos entre el 0,5 y 1%. Estos lodos requieren
ser estabilizados antes de que puedan ser dispuestos en el ambiente. El método
más común en las plantas de tratamiento es la digestión anaerobia, la cual
convierte carbono orgánico en metano (CH4) y carbono inorgánico (CO2) (Tsutiva,
2002). Para el caso brasileño, la legislación establece que los lodos generados en
las diferentes plantas de tratamiento deberán presentar baja atracción a vectores
que trasmiten enfermedades con el fin de tener buen uso agrícola. También
establece los requisitos mínimos de calidad del sedimento, relacionados con
sustancias inorgánicas y agentes patógenos. De igual manera, se presentan las
restricciones de los lugares donde el lodo puede ser aplicado, como por ejemplo
en áreas de conservación y áreas agrícolas con declive mayor al 10% (Bastos,
2003).

29
Otros compuestos orgánicos que se usan como acondicionadores de suelos,
incluyen residuos como lodos de aguas servidas, de cosechas, de compost y de
abonos verdes (Hickman y Whitney, 1992). La efectividad o no del acondicionador
varía con la cantidad agregada y la relación C:N. Los lodos de aguas servidas
pueden potencialmente contener niveles dañinos de metales pesados y otros
materiales tóxicos, por lo que deben analizados antes de proceder con su
utilización en agricultura.

1.7 Ciclos biogeoquímicos de nitrógeno y fósforo

1.7.1 Nitrógeno en agua


Los aportes más importantes de nitrógeno a los ecosistemas acuáticos son
suministrados por las aguas superficiales, corrientes subterráneas y la fijación
microbiana del nitrógeno atmosférico, el que se da tanto en agua como en
sedimento. Especial importancia tiene en piscicultura comercial el contenido de
compuestos nitrogenados, pues algunos de ellos como el amoniaco y los nitritos
tienen carácter tóxico (Yossa et al. 2011). Estos compuestos se originan en los
estanques como productos del metabolismo de los organismos bajo cultivo y son
liberados durante la descomposición bacteriana de la materia orgánica animal o
vegetal. Los desechos nitrogenados son transformados desde amoniaco a nitratos
por bacterias aeróbicas como Nitrosomonas, responsables de la transformación de
amoniaco (NH+4) a nitritos (NO2) y a la bacteria Nitrobacter, responsable del paso
de nitritos (NO2) a nitratos (NO3), formas que son asimilables por el fitoplancton
(Rodríguez y Anzola, 2001). La desnitrificación de nitratos (NO3) a nitrógeno (N),
que regresa de nuevo a la atmósfera para cerrar el ciclo, puede llevarse a cabo
por una variedad de bacterias tales como Pseudomonas, Bacillus, Achromobacter
y Micrococus.

El amoniaco ionizado (NH+4), el nitrito (NO2) y el nitrato (NO3) son las formas más
comunes de nitrógeno inorgánico disuelto en ecosistemas acuáticos (Camargo y
Alonso, 2006). Los desechos nitrogenados pueden dar lugar a efectos deletéreos
unificados y la forma NH3 es muy tóxica para los animales acuáticos,
particularmente para peces, mientras que la ionizada (NH+4) tiene un carácter
menos tóxico. El nitrato posee una baja toxicidad hasta niveles de 2 mg NO3 L-1. El
nitrito puede ser altamente tóxico, en cuanto interfiere con la capacidad de
transporte de O2 por la hemoglobina (Cho et al. 1994). Como el amonio es tóxico
en bajas concentraciones, es factor determinante en el tratamiento de aguas
residuales como requisito para la acuicultura que opera en estanques en tierra.

Varios enfoques han sido adoptados para reducir o eliminar los desechos
nitrogenados y el alto intercambio de agua limita la efectividad (o inefectividad) de
algunos enfoques tecnológicos destinados a la conversión de desechos
nitrogenados (biofiltros) o para reducir las salidas de desechos sólidos

30
nitrogenados o aquellos presentes en las lagunas de sedimentación. Un método
de fácil aplicación es la llamada filtración por plantas, la cual utiliza macrofitas
flotantes y emergentes tipo buchón, azola y elodea; estas asimilan nutrientes y
descomponen la materia orgánica en un proceso de autodepuración. También se
encuentra que la implementación de humedales artificiales, que debe abarcar un
25% del área del estanque o efluente según el caso, con un tiempo mínimo de
retención 48 horas para que haya una mejora en la calidad de efluente, se refleja
en la efectiva remoción del 60% de los sólidos suspendidos, del 5% del amonio y
del 85% de nitrito. Tales sistemas se han implementado con éxito en cultivos de
camarón, buscando en lo posible que el agua que retorna al medio presente
iguales o mejores condiciones que aquellas presentes en el afluente (Pardo et al.
2006).

La descomposición de desechos sólidos resulta de la mineralización y/o disolución


de diversos elementos, en particular del fósforo y nitrógeno, que se vuelven
formas disponibles para los productores primarios y contribuyen mayormente a la
eutrofización de los cuerpos de agua (Wetzel, 2001). En cuanto a los desechos de
fósforo, se consideran como el factor más limitante para las algas en crecimiento y
con papel relevante en la eutrofización en varios ecosistemas de agua dulce. El
enriquecimiento de nutrientes puede causar importantes alteraciones ecológicas
en las comunidades acuáticas, como la sobreproducción de la materia orgánica
por productores primarios; su posterior descomposición suele dar lugar a bajas
concentraciones de OD en los estratos inferiores del agua y en el sedimento,
especialmente en ecosistemas acuáticos con bajo recambio. La composición de la
biomasa acuática, en términos de materia orgánica, como C, N y P, es
relativamente constante con una relación de 105:15:1. Se generaliza que cualquier
elemento por debajo de la relación citada es un probable factor limitante en la
producción de la biota acuática.

1.7.2 Dinámica del Fósforo

1.7.2.1 Fósforo en agua


Corresponde a uno de los principales elementos necesarios para las plantas,
además de ser componente de ciertas proteínas, de los ácidos nucleares y de los
nucleótidos; por lo general es el regulador del crecimiento del fitoplancton en los
estanques piscícolas. El crecimiento normal de algas y la producción primaria de
materia orgánica en el agua están condicionadas a la existencia de fósforo
(Rodríguez y Anzola, 2001). Se encuentra en forma mineral o como compuestos
orgánicos; el que proviene del suelo y el agua, sumado al de ingreso excesivo por
nutrientes (alimento, fertilizantes, heces, animales muertos, aguas servidas, etc.),
se precipita rápidamente formando compuestos con otros elementos químicos del
sedimento como aluminio, hierro y calcio. Posteriormente, se resuspende por la
acción bacterial y es aprovechado por las plantas macrofitas y el fitoplancton; el

31
excedente regresa al sedimento para formar parte de la materia orgánica, donde
su disponibilidad depende del pH. En un estanque de peces, el fósforo se
encuentra representado en tres fracciones: el disuelto y disponible para las
plantas; la fracción lábil, donde se adsorbe en partículas de arcilla o materia
orgánica formando compuestos tipo hidróxido de aluminio o hidróxido de hierro
(que liberan iones fosfato) y, finalmente, la fracción no lábil, que representa
compuestos fosforados que se mineralizan y no están disponibles en ningún
momento (Yossa et al. 2011).

En estanques fertilizados se detectan diferencias entre las concentraciones que


deberían encontrase en el agua, de acuerdo a los aportes que fueron realizados,
y las que realmente se miden hasta finalizar cosecha, siendo estas últimas
significativamente menores. Esto indica que la mayoría de fósforo y nitrógeno que
son aplicados se eliminan del agua mediante diversos procesos y que solo
cantidades relativamente pequeñas son trasladadas a los peces (Wudtisin y Boyd,
2005). Obviamente en estos estanques, el nitrógeno y fósforo procedentes de
fuentes naturales son importantes para la producción de peces (Gross et al. 2000);
el nitrógeno de los fertilizantes no se elimina por la vía de los peces, sino que es
incorporado en el sedimento como nitrógeno orgánico, o se pierde a la atmósfera
a través de la desnitrificación y la volatilización del amoniaco.

Gibson (1997) se refiere a esta relación en los ecosistemas de agua dulce, los que
son generalmente limitados en P y N. Ha sido demostrado que en muchos
ecosistemas dulceacuícolas la concentración y la disponibilidad de fósforo tiene un
efecto directo sobre la biomasa de algas. Bostrom et al. (1988) determinan que el
fósforo biodisponible se asume como la suma del fósforo disponible y las formas
en que este puede presentarse según las diferentes condiciones físicas, químicas
y biológicas. Las formas más disponibles del fósforo son los ortofosfatos (por
ejemplo H2PO4, HPO4-2 y PO4-3), aunque algunos compuestos orgánicos que
contienen fósforo lo toman en cantidad variable por las algas.

1.7.2.2 Fósforo en suelo y sedimento


La principal fuente de fósforo orgánico está constituida por los residuos vegetales
y animales que se adicionan al suelo o sedimento. Los compuestos fosfatados
más importantes de la materia orgánica son nucleoproteínas, fosfolípidos y
fosfoazúcares. La mineralización de la materia orgánica en el suelo es lenta por
vía microbiana, requiriendo temperaturas de aproximadamente 25 a 30 ºC, pH
neutro y humedad cercana a la de capacidad de campo. El proceso de
mineralización está regido por la relación C:P de la materia orgánica, cuyo valor
crítico es aproximadamente de 200 (Brady y Weil, 1999).

En cuanto al fósforo inorgánico, es interesante tener en cuenta si la disponibilidad


es mediata o inmediata para los vegetales en términos de fósforo soluble,

32
insoluble e intercambiable. La forma soluble es la aprovechable para las plantas
en forma inmediata, es decir son fosfatos en la solución del suelo o sedimento. Su
concentración es muy débil y fluctúa entre 0,2 y 0,5 mg L-1, o sea 200 a 400 g ha-1
en 30 centímetros de espesor. Las formas solubles del fósforo son los fosfatos
diácidos (H2PO4) y los fosfatos monoácidos (HPO4); la concentración de los iones
fosfatos en solución está relacionada con el pH. La segunda forma de fósforo
inorgánico es la insoluble; se trata del fósforo que está formando parte de los
minerales primarios y secundarios, constituyendo la gran reserva de fósforo
inorgánico en el suelo. La insolubilización se puede deber a la precipitación como
fosfatos cálcicos en medio alcalino, o como fosfatos de hierro y aluminio en medio
ácido. La tercera forma de fósforo inorgánico corresponde al intercambiable, que
se llama también fósforo lábil o adsorbido. La adsorción de fosfatos depende del
pH y representan del 15 al 30% del fósforo inorgánico (Stevenson y Cole, 1999).

Alves y Baccarin (2005) postulan que el 66% del fósforo aportado por la ración
alimentaria en sistemas intensivos va al sedimento; el 11% se disuelve en el agua
y el 23% restante es incorporado por los peces en cultivo. La concentración de
fósforo en el suelo de fondo de estanques cultivados con Lepomis spp. e Ictalurus
punctatus varió entre 78 y 944 mg kg-1, con un promedio de 217 mg kg-1. En
comparación con las concentraciones de fósforo que se encuentra en suelos
naturales y en sitios adecuados para acuicultura de agua dulce en Tailandia,
Thunjai et al. (2004) encontraron que son altas, posiblemente por la entrada de
fósforo vía abonos orgánicos y, en ocasiones, por el alimento. Sin embargo, no
hubo correlación entre la edad del estanque y la concentración de fósforo. Los
suelos poseen gran capacidad de seguir adsorbiendo fósforo proveniente de los
fertilizantes y del alimento exógeno.

La concentración de fósforo en estanques cultivados con bagre de canal estuvo


entre 0,9 y 2,2%, para fósforo total, es decir entre 462 y 1712 mg kg-1 y con pH
entre 6,4 y 7,4. El pH aumentó durante el cultivo en los estanques de control. Se
encontró que el secado entre cosechas puede reducir las concentraciones de
fósforo y nitrógeno en el agua durante el siguiente ciclo de cultivo (Masuda y Boyd,
1994a). Cuando los estanques se secan y son llenados para la siguiente cosecha,
no debería haber problemas con las condiciones anaeróbicas en la interfase
suelo-agua, cuyos fondos no han sido sometidos a tratamiento. Esto debe reducir
la velocidad de liberación de fósforo a partir de fosfatos de hierro, cuyas
solubilidades son favorecidas por un bajo potencial redox y mejorar así la tasa de
fósforo eliminado del agua por las partículas del suelo.

Masuda y Boyd (1994b) establecen que el arado del fondo también debería
aumentar la cantidad de superficie de suelo expuesto al agua y esto mejoraría la
capacidad del suelo para absorber fosfatos del agua. La adición de nitrato de
sodio, un oxidante aplicado a suelos que se airean y secan, no mejoró la
capacidad para eliminar fosfatos del agua; esto sugiere que las tasas de

33
alimentación utilizadas en este estudio y el arado por sí solo, son esquemas
suficientes de manejo para mantener las condiciones oxidativas de la capa
superficial del sedimento. El nitrato de sodio solo sería útil como oxidante hasta
que la concentración de oxígeno disuelto esté prácticamente agotada dentro del
sedimento; establecen igualmente que las concentraciones de fósforo total poco
cambian con la profundidad de los sedimentos dentro de la capa superior de 20
centímetros. El arado de la parte inferior de 10 centímetros de profundidad, como
se reporta en el estudio, no debió haber influido en la concentración de fósforo
total de la capa superficial, al mezclarse sedimentos superficial y profundo; así, el
arado aumenta la capacidad del sedimento para adsorber fósforo en lugar de
reducir su concentración.

A pesar de una menor concentración de fósforo en el agua de los estanques


sujetos a secado del fondo entre cosechas, no hubo reducción en la actividad de
fitoplancton como se deduce por las concentraciones de clorofila a y las
estimaciones de productividad primaria bruta que se encontraron. Sin embargo, si
los estanques deben drenarse para la cosecha de peces, el secado del suelo de
fondo parece deseable, ya que reducirá las concentraciones de fósforo y
resuspensión de partículas del suelo por aireación en el siguiente ciclo. Las algas
filamentosas y plantas macrófitas pueden desarrollarse rápidamente, a menos que
los estanques se llenen rápidamente con agua y se apliquen adecuadamente
fertilizantes hasta que se desarrolle el fitoplancton deseado (Boyd y Tucker, 1998).

1.7.2.3 Fósforo en estanques


Hernández et al. (2009), trabajando sobre la composición del sedimento en
estanques piscícolas de los llanos orientales del país, postulan que el fósforo,
considerado un macronutriente, presenta características interesantes pues es
capturado por el sedimento de los estanques y de allí es liberado por la actividad
microbiana. Una parte de esa porción liberada es adsorbida por las plantas, pero
el sobrante reacciona con Fe3, Al3 y Ca2, para ser nuevamente fijado en el suelo.
Esto puede explicar la menor concentración de fósforo en el suelo que se presentó
en una de las granjas experimentales (57,8 ppm ± 17,8), respecto a la otra (78,3
ppm ± 17,7); en la primera, los altos contenidos de hierro pudieron reaccionar con
el fósforo para formar fosfatos de hierro.

Hernández et al. (2010), en un trabajo similar, determinaron el comportamiento del


fósforo disponible (ortofosfato) en estanques cultivados con cachama blanca (P.
brachypomus), en granjas ubicadas en diferentes sectores de llanura en los
departamentos de Meta y Casanare; se evaluó la cantidad de fósforo disponible en
el afluente, estanques y efluentes, durante una fase de cultivo. Se trata de un
trabajo pionero, con utilidad como referente primario ante la falta de legislación
sobre los vertimientos de la actividad piscícola en el país; entre los resultados más

34
relevantes se registra que el ortofosfato no tiene efecto acumulativo durante el
ciclo de cultivo (ver datos de la tabla 5).

Tabla 5. Valores promedio de fósforo disponible en agua y sedimento de afluente


y efluente en granjas piscícolas de los departamentos de Casanare y Meta
(Colombia).

Muestreo granja Afluente (ppm) Efluente (ppm)


Casanare
1 Agua 0,105 0,162
Sedimento 43,9 16,1
2 Agua 0,091 0,092
Sedimento 50,6 30,8
3 Agua 0,095 0,053
Sedimento 45,1 29,9
4 Agua 0,072 0,013
Sedimento 42,7 22,4
Muestreo granja Afluente (ppm) Efluente (ppm)
Meta
1 Agua 0,077 0,091
Sedimento 24,5 59,0
2 Agua 0,045 0,031
Sedimento 23,1 79,9
3 Agua 0,151 0,047
Sedimento 29,1 35,3
4 Agua 0,054 0,040
Sedimento 24,5 21,0
5 Agua 0,043 0,060
Sedimento 30,8 29,1
Fuente: adaptado de Hernández et al. (2010)

Se tiene que tanto en agua como en sedimento, la cantidad de fósforo disponible


que ingresa con el afluente y por el manejo de los cultivos, puede disminuir en el
efluente, de forma que la mayor cantidad se captura en el sedimento, bien sea en
forma orgánica o inorgánica. Esto se explica porque en los sedimentos se
presentan diferentes minerales catiónicos cuya cantidad depende de la estructura
geoquímica de la región; además, el sedimento de los sitios analizados difiere en
cuanto a su contenido de macro y micronutrientes. La concentración de aluminio
en los sitios de estudio se presentó en rangos que ayudarían a la rápida
precipitación del ortofosfato o fósforo disponible.

A nivel de ecosistemas acuáticos, la única forma significativa de fósforo inorgánico


es el ortofosfato (PO4-3). Una porción elevada del fósforo (> 90%) está unido a la
materia orgánica (MO) formando fosfatos orgánicos, que se preservan en una

35
serie de fracciones como consecuencia de la adsorción por varios
microorganismos, disolución o precipitación unida a metales (Ritvo et al. 1998). De
otro lado, las bacterias solubilizadoras de fosfato juegan un importante papel en la
transformación del fósforo insoluble a fósforo soluble; ellas producen ácidos
orgánicos que reducen el pH del sedimento y actúan como agentes quelantes que
traslocan cationes en los complejos fósforo-metal, lo que es un importante
mecanismo en la solubilización del fósforo (Yong-Hak et al. 2005).

Según Jansson (1988) y Barik et al. (2001), el fósforo que no es removido se liga
en el suelo a formas que no son asimilables por las plantas. En el agua de
estaques piscícolas con un pH neutro o alcalino se recicla el fosfato a través de
hidrólisis enzimática por la acción de la fosfatasa alcalina, que da resultado un
mecanismo significante para la regeneración del fosfato; además, parámetros
como pH, nitrato, nitrógeno, materia orgánica, conductividad y fosfato del agua,
son elementos cruciales que controlan las bacterias solubilizadoras de fosfato e
influencian los niveles de fósforo en el sistema acuático. En general, suelos con
acidez 5,5 a 6,5 son los que se consideran agrícolamente adecuados.

El sedimento que se origina en las granjas de peces, generalmente contiene un


elevado nivel de fósforo y puede eutroficar los cuerpos naturales de agua; por
tanto, la remoción o disminución del fósforo es obligatoria, aunque no siempre es
una práctica que se realiza en la mayoría de los países (De Bashand, 2004;
Dayton y Basta, 2005). La disponibilidad de fósforo en estanques de peces en
zonas lateriticas suramericanas es generalmente baja, lo que se atribuye a la alta
capacidad de fijación que se da en este tipo de suelos. El pH ácido y la alta
presencia de hierro y aluminio, aceleran la transformación de una mayor cantidad
de fósforo en hierro insoluble y fosfato de aluminio. La elevada tasa de fijación de
fósforo tiende a reducir la eficiencia de fertilizantes a base de fosfatos, pero mejora
la productividad primaria (Chattopadhyay et al. 2003).

Ensayos realizados en tanques de sedimentación por Ozbay y Boyd (2004)


mostraron cambios en la concentración de fósforo total al final del efluente, el cual
declinó rápidamente un 50% luego de 24 horas, con una menor tasa de reducción
entre las 24 y las 72 horas; la concentración de fósforo total no presentó una
reducción considerable a nivel de superficie de efluente. En cuanto mucho de este
fósforo total se asocia a materia orgánica particulada, plancton vivo, detritos y
partículas minerales, la reducción de fósforo total es similar a la que ocurre con
sólidos decantados, sólidos suspendidos totales y turbidez.

Una estimación para fósforo aplicado y fósforo retenido en cultivos semi intensivos
de camarón marino (L. monodon) fue realizada por Boyd y Corpron (2006). Se
aplicaron insumos de fósforo de 0,31 kg ha-1, superfosfato triple de 1,38 kg ha-1,
fósforo en el agua entrante de 25,8 kg ha-1 y fósforo en la alimentación de 65,3 kg
ha-1. Un alto contenido de arcilla en suelo en el fondo del estanque llego a
adsorber 45,2 kg ha-1 de fósforo. El aporte de fósforo del cultivo de camarón en el

36
cuerpo de agua receptor fue la diferencia entre la cantidad de fósforo en el
afluente y el del efluente (16,9 kg ha-1); como en casos anteriores con otras
especies, se confirma la acumulación de fósforo por el suelo de fondo o sedimento
la que, en este caso, llegó a acumular el 67,8% del fósforo que fue agregado a los
estanques.

Sobre el uso de los recursos y el manejo de residuos en la producción de camarón


marino se tiene el estudio de Penseng (2007). Encontró que las cantidades totales
anuales de nutrientes en el efluente causan incrementos en las concentraciones
de N, P y C. El aumento diario fue demasiado pequeño para medirlo, y también
influyen los residuos que son reciclados mediante procesos naturales y el arrastre
de desechos por la acción de las mareas, conjuntamente al flujo de agua dulce. En
este caso y bajo las condiciones de manejo que se aplicaron, el autor concluye
que parece poco probable que una granja pueda ser una amenaza de
contaminación para un ecosistema estuarino. Igualmente considera que el efluente
descargado durante un solo ciclo de cultivo aportó 433 kg de N, 288 kg de P y
3.967 kg de C orgánico, estimaciones que permiten determinar que el aporte de la
descarga anual de la granja llega a 65.702 kg de N, 43.704 kg de P y 601.293 kg
de C Orgánico. Aunque estos datos muestran la gran cantidad de nutrientes no
utilizados, en la granja se tenía la ventaja de una laguna para aguas residuales
con una aceptable área de 523 m2.

1.7.2.4 Fósforo en el alimento

La importancia del fósforo radica en que es esencial para el metabolismo y la


formación ósea en peces, por lo que su deficiencia esta relacionada con
deformaciones y mal crecimiento. El fósforo está poco disponible en proteínas de
origen vegetal y carbohidratos. Por otra parte, los niveles de fósforo en el agua
pueden limitar la producción piscícola por ser generador de polución (Arango,
2008).

Castledine (1986) describe factores que pueden ser utilizados para estimar los
residuos generados a partir de un cultivo de salmónidos basados en el consumo
de alimento. Los nutrientes solubles incluyen formas de fósforo y nitrógeno. El
fósforo es excretado en formas solubles y en partículas y la forma del fósforo
consumido por los peces afecta la cantidad de fósforo soluble y partículas
excretadas. El fósforo está disponible a partir de los ingredientes vegetales y los
productos animales utilizados para formular la dieta. Fuentes de origen animal
como harina de pescado, harina de carne y harina de hueso, contienen mayores
concentraciones de fósforo. El que esta presente en los alimentos de origen
animal se utiliza con más facilidad que el de plantas y alrededor de un 60% del
fósforo en el material vegetal no está disponible para los peces y pasa de manera
directa a formar heces.

37
El contenido de fósforo de los ingredientes de los alimentos para peces es
altamente variable; algunos contienen cantidades limitadas (0,3% en harina de
sangre), mientras que en otros estos niveles son sustancialmente mayores (4% a
5% en harinas de carne y hueso) (Cho y Bureau, 2001). La biodisponibilidad de un
elemento es el factor que afecta el valor de los requerimientos dietarios de un
animal y, en particular, conocer la del fósforo permite formular dietas de bajo
impacto ambiental. El contenido de fósforo en la harina de pescado es del 3,81%
(NRC, 1993) y su digestibilidad aparente oscila entre el 66 y 74%. Las diferentes
formas del fósforo en los alimentos se clasifican como: fósforo inorgánico, que son
fósforos minerales (fosfato monocalcico, dicalcico y tricalcico), fósforo semi-
orgánico, que son los productos animales (harinas de carne, hueso, pescado, etc)
y, finalmente, el fósforo en vegetales, que son los ingredientes que lo contienen en
la forma de fitatos y fósforo no fitico (Arango, 2008).

Las exigencias de fósforo para peces pueden variar entre el 0,45 y 0,75% de la
dieta, dependiendo de la especie y de otros factores fisiológicos, como la actividad
gástrica. En general, los peces consiguen digerir y asimilar apenas una parte del
total presente en los alimentos, razón por la cual las dietas deben contener
mayores niveles de fósforo con respecto a las exigencias determinadas para cada
especie. Las principales fuentes de fósforo son los solubles secos de harina de
pescado, harina de cangrejo, harina de camarón y semilla de algodón; los
salvados de arroz y de trigo, subproductos de arroz y de trigo (Vásquez, 2004).

En trucha arco iris de talla de consumo (207 a 586 g de peso corporal) no se


observa ninguna diferencia en la digestibilidad del fósforo a 11 oC (Steffens, 1987),
para peces en general, la absorción se ve influenciada por varios factores. Se
eleva la absorción de fósforo al aumentar la temperatura y descender la tasa de
calcio en el agua; peces en ayuno y mantenidos en bajas temperaturas toman una
cantidad mínima del elemento. El alimento tiene como fuente de fósforo mucha
mayor importancia que la del agua circundante, cubriendo en esencia las
necesidades del organismo. El calcio del alimento dificulta el aprovechamiento del
fósforo por fijación química, por lo que entonces hay menos fósforo disponible que
la que se da con raciones carentes o pobres en calcio. En el cuerpo, el fósforo
tomado del alimento se destina sobre todo a la constitución de tejidos de sostén
(hasta 90%). La presencia de fósforo en el agua reduce la utilización del que se
ofrece en la ración. Si se toma en consideración el hecho de que muchas especies
piscícolas son capaces de cubrir gran parte de sus necesidades de Ca a expensas
del agua circundante (aguas con buen nivel de Ca), el alimento debe tener
regularmente un contenido bajo de Ca y una elevada tasa de P.

Según Steffens (1987) el aprovechamiento del fósforo procedente de la dieta es


alto; el cociente de fósforo (mg P del alimento/mg de P aumentado en el pez) está
por lo general entre 2 y 3. El fósforo absorbido en exceso a partir de la ración se
vuelve a excretar enseguida en forma hidrosoluble, presumiblemente con la orina.
La totalidad del fósforo excretado por el pez se puede desglosar en fósforo en

38
partículas al que se le suma el fósforo que es soluble, el que a su vez puede
dividirse entre fósforo orgánico y PO4. Una considerable parte del PO4 está
constituida por el ortofosfato inorgánico libre, el que resulta de máxima importancia
para la producción primaria en el agua. Puede partirse del hecho de que la
excreción de fósforo se realiza en máxima proporción con las heces en forma de
fósforo en partículas, como lo demuestra Olson (1992) al medir valores de
nutrientes presentes en las heces de peces, tal como se observa en el resumen de
la tabla 6.

Tabla 6. Nutrientes esenciales medidos en el estiércol de pescado.

Nutriente Unidad de Fresco Compostado


medida
Nitrato ppm 11,8 33,0
Nitrógeno total % 3,2 2,4
Fósforo total % 1,4 1,7
Potasio % 0,12 0,09
Magnesio % 0,25 0,28
Calcio % 3,3 4,4
Azufre % 0,5 0,3
Fuente: adaptado de Olson (1992)

De los fosfatos inorgánicos, la trucha arco iris aprovecha muy bien el fosfato de
calcio (Ca(H2PO4)2), así como los de sodio y potasio (NaH2PO4 y KH2PO4). En
alevinos de esta especie, con peso de 1,2 g, los contenidos de fósforo en el
alimento generaron mayores crecimientos y superiores cifras de fósforo y calcio
en el cuerpo total y en las vértebras. Como necesidad mínima para un normal
crecimiento se ha determinado un contenido entre 7 y 8 g de fósforo kg-1 de
alimento. La trucha arco iris es capaz de aprovechar bien el fosfato contenido en la
harina de pescado, aún cuando a veces utiliza mejor el fósforo del fosfato sódico
primario Na2HPO4 (Steffens, 1987).

Fisiológicamente, también en truchas, el fosfato inorgánico proveniente de la


alimentación puede absorberse en considerable cuantía mediante intercambio o
depósito en forma no iónica de ácido soluble en el canal digestivo e igualmente
mediante transporte en forma iónica a través del estómago hasta los músculos y
tejidos estructurales. Rodehutscord (2000) menciona que para trucha arco iris, el
fósforo ingerido con la dieta oscila entre el 2 y el 4%, el cual se distribuye en
0,37% para máximo crecimiento, 0,53% para máxima disposición en hueso, con lo
cual el requerimiento total es de 0,90%; el resto es eliminado vía heces y
excretado en orina, siendo entonces un factor de impacto ambiental por
eutrofización, situación que se puede extrapolar a otras especies de cultivo.

39
Por otra parte, generalmente entre un 60 y 70% del fósforo presente en materias
primas de origen vegetal se encuentra en forma de fósforo fítico (Liebert y Portz,
2007), con baja biodisponibilidad para los animales, pues se trata de una molécula
en gran parte indigerible, en cuanto en los monogastricos no se tienen cantidades
suficientes de fitasas (mioinositol hexafosfato, fosfohidroxilasas), necesarias para
liberar el fósforo; estas enzimas son producidas por hongos y bacterias, y
degradan el ácido fítico en sus sales (fitatos), con lo que se libera inositol, inositol
monofosfato y fosfato orgánico (Kumar et al. 2011). Como el fósforo contenido en
las materias primas se encuentra principalmente como ortofosfatos (PO4-3), será la
hidrólisis del fósforo orgánico en el tracto gastrointestinal, que libera el PO4-3, la
única vía por la cual el animal pueda absorberlo y utilizarlo (Lall, 2002). Por causa
de la baja actividad de las fitasas en animales, la mayor parte del fósforo fítico
contenido en la dieta es eliminado con las heces generando problemas de
contaminación ambiental y estimulando procesos de eutrofización en sistemas
acuícolas (Nwanna y Schwarz, 2008).

Así, de forma ideal, las raciones para peces deberían incluir niveles de fósforo
altamente disponible, sin exceder los requerimientos para la especie a la que se le
suministra. Se tiene que, en trucha arco iris, la eficiencia de la utilización del
fósforo es máxima cuando la concentración dietaria es menor que los
requerimientos (Rodehutscord, 2000) y decrece cuando los valores son más altos
de los que se necesitan. La digestibilidad del fósforo en ingredientes comunes en
dietas para peces, como la trucha, en la harina de pescado es del 45-52%
(Suguiera et al. 1999). En esta especie, con un estómago verdadero que presenta
digestión ácida, el coeficiente de digestibilidad aparente del fósforo puede estar
entre el 40 y el 60%. El coeficiente de digestibilidad aparente del fósforo es más
bajo en peces agástricos como la carpa común. Se tiene que tilapias y salmónidos
utilizan el fósforo presente en la harina de pescado más eficientemente que la
carpa y el bagre de canal (NRC, 1993).

A nivel del impacto ambiental que se relaciona con el fósforo, Arango (2008)
menciona que el peso seco del pescado es el 25% del peso húmedo y, de este, el
4,1% corresponde al fósforo. El fósforo en el alimento puede ser del 1,2% en
promedio (del 0.8 al 2.2%). Así, con un factor de conversión de 2, con cada t de
alimento se obtienen 500 kg de pescado fresco y 125 kg de pescado seco. Por
tanto, la asimilación del fósforo para este caso equivaldría a un total de 5 kg. En
una dieta de la que se ofrecen 12 kg, hay pérdida de 7 kg por cada 500 kg de pez
fresco producido. Con las nuevas estrategias, como el uso de fitasas, se podría
reducir entre un 15 y un 30% la capacidad poluente del fósforo en las dietas.

Cualquier excedente de fósforo en la dieta se excretará principalmente por los


riñones y solo una pequeña cantidad con las heces, estas se hayan protegidas por
una envoltura mucosa que por lo general permanece intacta si el sedimento se
retira pronto después de la deposición. Si se mantiene durante un período
prolongado de tiempo, el movimiento de natación de los peces hará que se

40
rompan en partículas más pequeñas, las que pueden resuspenderse y contribuir
con los sólidos totales y sólidos suspendidos en el efluente, en caso de que este
no se encuentre completamente asentado y eliminado antes de la descarga. Este
proceso es equivalente al que se produce con las partículas de alimento no
consumido (Palmer, 1993).

Boyd et al. (1995) estiman que cerca de 2/3 del fósforo ofrecido a los estanques
vía alimentación se acumula en el suelo de fondo. También que la mayor parte del
fósforo del suelo está fuertemente unido y que sólo una pequeña cantidad es
soluble en agua. Los estudios sobre adsorción y liberación de fósforo por el suelo
de estanques no se consideran una fuente importante hacia el agua, pues el que
es liberado por la descomposición de la materia orgánica en el fondo se adsorbe
rápidamente por el suelo (muy insoluble) y poco entra al agua. Los suelos más o
menos neutros en pH, tienen menor capacidad de adsorber fósforo y una mayor
tendencia a liberarlo respecto a lo que ocurre con suelos ácidos (Boyd, 1995).

1.8 Estudios sobre sedimentos en Colombia


Aunque son pocos los estudios específicos sobre el tema, los mayores esfuerzos
investigativos en Colombia se tienen con una línea de trabajo establecida en el
Instituto de Acuicultura de los Llanos, Universidad de los Llanos (departamento del
Meta). En particular, en un estudio base fue analizado el sedimento proveniente de
estaques piscícolas comerciales de cachama blanca (Piaractus brachypomus); en
este se procedió a caracterizar la concentración de materia orgánica, pH,
macronutrientes y micronutrientes en granjas localizadas en la región de los
llanos. La materia orgánica encontrada en las granjas osciló entre 1,50 y 1,62%,
considerados como valores bajos, pues el valor es inferior al 10%, lo que permite
catalogarlo como sedimento mineral. Los valores de pH presentaron valores de
5,74 y 7,14, considerados como aptos para la producción piscícola y con especial
significado en el manejo de estanques, ya que el pH modifica la solubilidad de los
minerales.

Los análisis revelaron diferencias entre las dos granjas objeto del seguimiento,
para los valores de pH, fósforo, calcio, cobre, hierro, zinc, boro y azufre
(Hernández et al. 2009). En las conclusiones mencionan que las diferencias, en lo
que se refiere a la cantidad de nutrientes en el sedimento, están fuertemente
influenciadas por el origen de los suelos. Aunque algunos macro y micronutrientes
tienen valores altos y hay diferencias entre las granjas, no se observaron signos
de toxicidad o deficiencias en los peces objeto de cultivo.

Yossa et al. (2009) analizaron la granulometría del sedimento en estanques


piscícolas que se utilizan para investigación en el Instituto, los que tienen más de
20 años de uso. Es estos, la arena representó más del 50%, seguida del limo y la
arcilla; durante el primer muestreo se obsevó que la capa superficial solamente

41
contenía limo y arcilla. El sedimento del estanque se clasificó como un suelo tipo
arenoso. Los sedimentos presentaron porcentajes de materia orgánica inferiores
al 10% (minerales), no aportan en la fijación de algunos de los metales presentes
en el sedimento para que sean reciclados y se encuentren disponibles en la
columna de agua. La importancia de conocer la granulometría de las partículas
que componen el sedimento, es que determina entre otros, la textura del fondo del
estanque, la fauna que habita allí, la capacidad de retención de residuos de
procesos metabólicos, como amonio y fosfatos, y la afinidad de absorción para
sustancias adicionadas al estanque como cal, abonos orgánicos y fertilizantes
(Vialori et al. 2004).

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51
2. Caracterización general de los sedimentos producidos en una
explotación intensiva de trucha arco iris (Oncorhynchus mykiss
Walbaum, 1792).

Resumen

El sedimento es la capa superficial del fondo en estanques o en lagunas de


oxidación y se origina fundamentalmente por la deposición de sólidos en
suspensión, nutrientes y partículas del suelo que están en contacto con el agua, y
que son naturalmente producidos por la operación de las granjas; su disposición y
manejo se constituye actualmente en un imperativo técnico, dadas las
implicaciones ambientales que tienen las descargas provenientes de
explotaciones piscícolas. Con el fin de establecer una línea base al respecto del
impacto de la producción intensiva de truchas sobre la fuente hídrica, se
caracterizó el sedimento en tres sectores: afluente, laguna de oxidación y efluente;
el análisis fue de tipo general e incluyó doce parámetros, los cuales fueron
medidos en tres momentos diferentes. Los valores medidos fueron comparados
mediante análisis de varianza de una vía con α = 0,05 como nivel de significancia
y cuando fue necesario se realizó una prueba de Tukey para precisar las
diferencias. Para los parámetros de capacidad de intercambio iónico, fósforo
disponible, saturación de bases, materia orgánica, carbono orgánico y
granulometría las diferencias encontradas indican el efecto de la actividad de
producción sobre los sedimentos; para los restantes no se demostró afectación. La
estructura de recepción de aguas utilizadas o laguna de oxidación es un
mecanismo válido y efectivo en la mitigación de los impactos. Se discuten
aspectos sobre su eficiencia y se analizan posibles requerimientos técnicos para
su instalación, considerando las particularidades de la producción de peces en
aguas de baja temperatura y en sistemas de tipo intensivo.

Palabras clave: sedimento, análisis general, trucha arco iris, piscicultura.

2.1 Introducción
La piscicultura es un eficiente medio para producir alimento de alta calidad; la
actividad involucra una estrecha interacción entre el agua y el sedimento, por lo
que la escala del manejo de los componentes tendrá efecto sobre la sobrevivencia
y crecimiento de los organismos cultivados (Ferraz de Queiroz, 2004). Durante el
proceso de producción hay una sedimentación continua de residuos que tienen
origen en una variedad de fuentes. Estas incluyen suelos erosionados, suelo
lavado desde los diques o muros, heces de los animales de producción, alimento
no consumido, plancton muerto, cal, abonos y partículas suspendidas que
ingresan con el agua (Parra y Espinosa, 2008), por lo que en todos los sistemas
acuáticos el sedimento desempeña un importante papel en la dinámica global del

52
ecosistema; el suelo de los estanques piscícolas no difiere grandemente de los
suelos utilizados para la agricultura en sus características físicas, químicas y
mineralógicas, estando la principal diferencia en que este se encuentra
continuamente inundado y el intercambio de compuestos entre los dos
compartimentos (agua y sedimento) afecta en alto grado a la composición del
agua (Boyd, 1995).

La calidad de los suelos o sedimento en estanques se determina principalmente


por el contenido de materia orgánica (MO), potencial de hidrógeno,
macronutrientes y potencial redox entre otros. Los nutrientes minerales esenciales
son suplidos por el suelo de fondo y su acumulación depende del potencial redox
del fondo y de la actividad microbiana, las cuales determinan las formas de
asociación de los metales con la matriz del sedimento (Krebs, 2003). Estos se
disuelven en los poros del suelo y de allí se difunden hacia el agua, donde son
absorbidos por el fitoplancton y las algas; otra significante porción es fuertemente
atraída por iones de carga opuesta para formar complejos solubles o insolubles,
dependiendo de las condiciones oxido-reductoras, relacionadas con la
concentración de 02 en el sedimento.

Los sedimentos provenientes de la producción piscícola poseen un alto contenido


de nitrógeno y materia orgánica, lo cual puede mejorar las condiciones del suelo
donde estos son aplicados, en relación con la fertilización y la promoción de
actividad microbiana; las concentraciones de metales pesados en lodos piscícolas
no sobrepasan por lo general los límites establecidos. Se podrían aplicar en suelos
degradados, preservando y mejorando sus características, evitando su deterioro;
es decir, actuando como un verdadero acondicionador.

La investigación nacional referente a esta línea es escasa; desde una perspectiva


global, pretendiendo establecer una primera serie de registros provenientes de la
actividad piscícola intensiva, este proyecto se formuló con objetivos dirigidos a
analizar la composición general de sedimentos presentes en afluente, laguna de
oxidación y efluente provenientes de un sistema mixto de producción de truchas;
la meta se focaliza en la definición de una línea base que permita generar
elementos que sirvan de sustento a posibles procedimientos para la adecuada
disposición, uso y manejo del material sedimentado que se produce en este tipo
de explotaciones.

2.2 Materiales y métodos

2.2.1 Localización

El trabajo se adelantó en las instalaciones de una explotación comercial de trucha


arco iris, ubicada en el municipio de Guasca (Cundinamarca) a 2850 msnm y
coordenadas 4º 48´ 36.28” LN y 73º 52’ 43.95 LO, la cual se abastece de aguas

53
del río Siecha, con un caudal otorgado de 80 L s-1. La temperatura media del agua
es de 11.5 0C y los paramétros fisicioquímicos de la fuente la hacen especialmente
apta para adelantar la etapa de producción de semilla de la especie. Por estar
especializada en la actividad mixta de producción de truchas (tanto alevinos como
carne) y, además, disponer de infraestructura para la captación y manejo de las
aguas servidas, en esta granja se reúnen las condiciones necesarias para el
soporte experimental en lo que se refiere a disponibilidad y naturaleza de las
muestras de sedimento.

2.2.2. Material experimental


Se tomaron muestras compuestas por el sedimento de origen en la fuente hídrica
(afluente), muestras provenientes de la laguna de oxidación y del efluente
(exactamente en el sitio de descarga); en total se adelantaron 3 muestreos,
realizados cada 45 días durante el período Septiembre – Diciembre de 2013.

Para afluente y efluente las muestras se obtuvieron desde varios puntos de las
orillas y, en el caso de la laguna de oxidación, desde un bote plástico; en todos los
casos se empleó un tubo de PVC con diámetro de 3 pulgadas y 150 cm de
longitud, al cual se le adaptó otro tubo de 20 cm con orificios para la eliminación
de excedentes de agua (Figura 1).

Figura 1. Detalle del tubo muestreador para lodos.

En los sitios de muestreo, la colecta del sedimento fue superficial (< 10 cm) y para
la recolección se trazó una ruta en zig-zag. También, de cada uno de los sitios se
tomaron 12 submuestras, las que fueron homogenizadas de manera
independiente dentro de un balde plástico, de forma que al final se obtuvo una
única muestra compuesta por sector. Cada muestra (aproximadamente de 2 kg)
de peso estuvo compuesta por la mezcla del total de las submuestras (unos 5 kg
de sedimento). El material recolectado fue extendido en plataforma plástica

54
durante 5 horas, lo que permitió su escurrimiento y secado. Posteriomente fue
depositado en bolsas plásticas sellables, identificado y almacenado en nevera
térmica hasta su traslado (< 24 horas) al Laboratorio Nacional de Suelos (Instituto
Geográfico Agustín Codazzi) en donde se realizaron los análisis respectivos.

2.2.3 Datos experimentales

Los datos de los muestreos realizados en cada sitio, por duplicado, provienen del
afluente, la laguna de oxidación y el efluente. En total, sobre el sedimento se
midieron las siguientes variables: capacidad de intercambio catiónico, calcio,
magnesio, potasio, sodio, fósforo disponible, saturación de bases, bases totales,
carbono orgánico, materia orgánica, relación carbono: nitrógeno y la textura.

Para la estimación de pérdidas por alimentación se utilizaron dos canaletas de


alevinaje previamente limpiadas; se programó una sesión de suministro con 7
raciones ofrecidas cada hora. Después de 2 horas de la última ración, se procedió
a vaciar cada una de las canaletas realizando simultáneamente el cepillado de
fondo, de forma que el arrastre permitiera que los residuos fuesen capturados en
una trampa ubicada en el tubo de desague. Estos se dejaron secar al aire durante
una hora y luego fueron empacados en bolsas plásticas sellables. El secado final
se hizo en labaratorio y, después de extraer material exógeno diferente del
alimento, fue pesado en balanza digital (Ohaus modelo Adventurer) con
aproximación de 0,001 g.

Directamente en la granja se recopiló información sobre el tipo de alimento


empleado para cada fase de cultivo. Se tuvo en cuenta la casa productora, análisis
bromatológico referenciado, tiempo de rotación, cantidad utilizada por tiempo,
prácticas de alimentación (frecuencia y ración ofrecida). También se obtuvieron los
registros sobre inventario completo de individuos, en todas las fases, presentes en
la fecha de cada muestreo. Los datos incluyeron mortalidad, ovas ingresadas,
traslados de alevinos y despachos.

Los registros finales obtenidos resultaron de 3 muestreos realizados con diferencia


de 45 días. Para cada uno se obtuvo, por duplicado, muestras representativas de
sedimento de los tres sectores definidos (afluente, laguna de oxidación y efluente).
En todos los casos se midieron las siguientes variables:

• Capacidad de Intercambio Catiónico (CIC): Es la capacidad que tiene un


suelo para retener y liberar iones positivos, merced a su contenido en arcillas y
materia orgánica. Las arcillas están cargadas negativamente, por lo que suelos
con mayores concentraciones de arcillas exhiben mayor capacidad de
intercambio catiónico. A mayor contenido de materia orgánica en un suelo,
aumenta su CIC. Igualmente, la CIC puede ser definida como la medida de las
cargas negativas del suelo y se expresa en centimoles por kilogramo de suelo

55
y es una medida de la cantidad de cationes fácilmente intercambiables que
neutralizan la carga negativa existente en el suelo (Sánchez, com. per. 2014)1;
los principales cationes intercambiables del suelo son calcio, magnesio, sodio,
potasio, aluminio, hierro, manganeso e hidrógeno.

• Calcio (Ca): Elemento constituyente de la lámina media de las paredes


celulares (Lora, 2010).

• Magnesio (Mg): Elemento constituyente de la molécula de clorofila y requerido


por muchas enzimas involucradas en la transferencia de grupos fosfato.

• Potasio (K): Elemento requerido como cofactor por más de 40 enzimas,


además como factor regulador del movimiento del agua en la planta, en lo
relacionado con la dinámica de los estomas (Castro y Gómez, 2010).

• Sodio (Na): Elemento que sustituye al potasio en algunas funciones.

• Fósforo disponible: Es el fósforo disuelto en la solución del suelo y que las


plantas pueden adsorber, puesto que la mayor parte del fósforo en el suelo
existe en compuestos químicos estables, sólo una pequeña cantidad de fósforo
está disponible para la planta en cualquier momento dado y se determina
mediante la marcha analítica conocida como Bray II (Sánchez, com. per.
2014)1.

• Saturación de bases: Cantidad de iones cargados positivamente, con


exclusión de iones de hidrógeno y aluminio, que son absorbidos en la
superficie de las partículas del suelo; se mide y se expresada como porcentaje.
La saturación de bases se relaciona positivamente con el pH del suelo debido
a que un valor de saturación de bases alta indicaría que los sitios de
intercambio de una partícula de suelo están dominadas por iones no ácidos. Se
calcula como el cociente (BT/CIC x 100).

• Bases Totales (BT): Sumatoria de los iones intercambiables del suelo, que
son calcio, magnesio, potasio y sodio.

• Carbono Orgánico (CO): Componente importante del ciclo global del carbono,
ocupando el 69,8 % del carbono orgánico de la biosfera. El suelo puede actuar
como fuente o reservorio de carbono dependiendo de su uso y manejo. El
carbono orgánico del suelo se encuentra en forma de residuos orgánicos poco
alterados de vegetales, animales y microorganismos, en forma de humus y en
formas muy condensadas de composición próxima al carbono elemental.

1
Agrólogo, MSc. Director Laboratorio Nacional de Suelos, IGAC.

56
• Materia Orgánica (MO): Es uno de los componentes del suelo, está formada
por los restos vegetales y animales que por la acción de la microbionta del
suelo son convertidos en una materia rica en reservas de nutrientes para las
plantas, asegurando la disponibilidad de macro y micronutrientes. La materia
orgánica del suelo es cercana al 50% de carbono orgánico, así que para
estimar la MO, se multiplica el CO por 2, generalmente por 1,9.

• Relación Carbono: Nitrógeno (C: N): Resulta de dividir el % de carbono


orgánico por el % de nitrógeno total e indica el grado de maduración y calidad
de las sustancias orgánicas o húmicas que resultan de la síntesis de los restos
orgánicos vegetales o animales que se acumulan en el suelo; un valor optimo
está entre 12 y 20.

• Textura: Es la proporción en la que se encuentran distribuidas las partículas


elementales que pueden conformar el suelo. Según sea el tamaño, porosidad o
absorción del agua en la partícula del suelo o sustrato, puede clasificarse en 3
grupos básicos que son: arena (fracción visible y sin coherencia, con diámetro
entre 0,1 y 0,05 mm); limo (fracción no visible a simple vista, con diámetro
entre 0,05 y 0,002 mm) y arcilla (fracción más fina del suelo que retiene agua,
con diámetro < 0,002 mm) (Wedler, 1998).

2.2.4 Análisis estadístico

El primer acercamiento al análisis de los datos fue de tipo exploratorio y


descriptivo, con el fin de determinar el comportamiento de los datos sobre cada
variable y precisar posibles tendencias y relaciones. Para efectos de diseño
experimental, las variables respuesta fueron la serie de parámetros de
composición del sedimento producido por efectos de la operación de la granja; de
cada sector muestreado (afluente, laguna de oxidación y efluente) y por cada
fecha, el valor de los parámetros se determinaron por triplicado.

La comparación inicial entre los registros correspondientes a cada parámetro de


composición se realizó mediante Análisis de Varianza de un factor (parámetro) con
tres niveles (sitios de muestreo). En caso de presentarse, las diferencias fueron
precisadas mediante prueba de Tukey. La comparación entre los registros de cada
parámetro en los tres tiempos se hizo mediante un análisis de medias. En todos
los casos se estableció la significancia en α = 0,05. La robustez del modelo se
podría probar en independencia (Durban - Watson), varianza común (Levene) y
normalidad (Shapiro - Wilk). El manejo de los datos se efectuó utilizando el
programa estadístico de SPSS y las aplicaciones de Excel.

2.3 Resultados

57
2.3.1 Caracterización general

Los muestreos efectuados sobre sedimento de afluente, laguna de oxidación y


efluente se realizaron durante los últimos cuatro meses del año 2013. Los valores
de análisis general para los 13 parámetros analizados se presentan en la tabla 7 y
en la tabla 8 se presentan los valores de Anova para grados de libertad, F y p.

Tabla 7. Valores (media ± DE) del análisis general para sedimentos de afluente,
laguna de oxidación y efluente en la granja de producción.

Parámetro Unidad Afluente Laguna Efluente Método analítico


oxidación
CIC cmoles/kg* 5.03 ± 0.68 36.76 ± 3.43 10.30 ± 0.45 Acetato de amonio
1N y pH 7,0
Ca cmoles/kg 3.63 ± 1.95 3.66 ± 0.61 2.30 ± 1.15 Acetato de amonio
1N y pH 7,0
Mg cmoles/kg 0.62 ± 0.16 0.54 ± 0.17 0.31 ± 0.66 Acetato de amonio
1N y pH 7,0
K cmoles/kg 0.12 ± 0.03 0.16 ± 0.13 0.10 ± 0.06 Acetato de amonio
1N y pH 7,0
Na cmoles/kg 0.10 ± 0.05 0.18 ± 0.15 0.10 ± 0.08 Acetato de amonio
1N y pH 7,0
Fósforo mg/kg 25.13 ± 7.29 169.66 ± 65.76 ± Bray II
disponible 48.95 29.47
Saturación % 77.90 ± 12.33 ±1.66 27.70 (B.T./CIC x 100)
de bases 22.94 ±11.45
Bases cmoles/kg 4.46 ± 2.00 4.53 ± 0.96 2.83 ±1.05 (Ca + Mg + K +
Totales Na)
Carbono % 0.36 ± 0.09 7.86 ± 0.80 1.63 ± 0.23 Walkley-Black
Orgánico
Materia % 0.69 ± 0.17 14.94 ±1.52 3.10 ± 0.43 C.O. x 1,9
Orgánica
Relación 12.47 ± 1.13 10.58 ± 0.04 10.65 ± 0.09 (N calculado como
C:N M.O./20)
pH 5.80 ± 0.10 5.36 0.20 5.60 ± 0.26 Potenciómetro
relación
suelo/agua 1:1
Granulome % 88.83 ± 5.93 51.73 ± 5.80 82.03 ±1.85 Bouyoucos
tría Arena
Granulome % 5.06 ± 2.95 38.30 ± 7.07 10.46 ± 2.06 Bouyoucos
tría Limo
Granulome % 6.10 ± 3.20 9.96 ± 4.62 7.50 ± 2.95 Bouyoucos
tría Arcilla
* cmoles/kg = miliequivalente/100g

58
Tabla 8. Valores Anova para grados de libertad, F y p del análisis general para
sedimentos de afluente, laguna de oxidación y efluente en la granja de producción.

Parámetro Grados de libertad Valor F Valor p


CIC 2 208.283 0.000
Ca 2 0.993 0.424
Mg 2 3.680 0.091
K 2 0.337 0.727
Na 2 0.605 0.576
Fósforo disponible 2 15.070 0.05
Saturación de bases 2 16.030 0.004
Bases totales 2 1.377 0.322
Carbono orgánico 2 205.793 0.000
Materia orgánica 2 205.882 0.000
Relación C:N 2 7.890 0.021
pH 2 3.422 0.101
Granulometría arena 2 48.496 0.000
Granulometría limo 2 45.352 0.000
Granulometría arcilla 2 0.854 0.472

En la Capacidad de Intercambio Catiónico (CIC), se presentaron diferencias


significativas entre los sitios de muestreo, con el mayor registro en la laguna de
oxidación. Los valores en el afluente se consideran bajos por ser menores a 10
cmoles kg-1 y en la laguna de oxidación el valor es alto por ser superior a 20
cmoles kg-1, en consonancia con la clasificación que al respecto define el IGAC
(2013). Se podría relacionar con el alto contenido de arcillas, especialmente las
que están asociadas con la materia orgánica fina de la laguna de oxidación, con
olor típico a descomposición y con tamaño de partícula menor a 0,002 mm (Mojica
y Villaneda, 2001). Finalmente el valor en el efluente puede considerarse como
medio por encontrase dentro del rango aproximado de 10 a 20 cmoles kg-1 (Figura
2).

59
Figura 2. Valores de Capacidad de Intercambio Catiónico CIC (cmoles kg-1)
obtenidos en sedimento de afluente, laguna de oxidación y efluente. Barras con
letras diferentes expresan diferencias significativas (p<0.05).

Los valores de los iones intercambiables del suelo como calcio, magnesio, potasio
y sodio no presentaron diferencias significativas entre los sitios de muestreo. El
calcio en afluente y en laguna de oxidación presentó promedios considerados
como medios (dentro del rango 3,0-6,0 cmoles kg-1); en el efluente, el valor de 2,3
cmoles kg-1 se considera bajo por ser inferior a 3,0 (Sánchez, com. per. 2014)
(Figura 3). Los datos para magnesio son calificados como bajos en los tres puntos
de muestreo; este macronutriente solo está disponible en pH mayores a 6,5 en
sustratos neutros-básicos, los cuales no se reportaron en las muestras analizadas
(Figura 4).

Figura 3. Valores de calcio (cmoles kg-1) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente.

60
Figura 4. Valores de magnesio (cmoles kg-1) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

De los cuatro iones mencionados, cobra mayor importancia el potasio por su


función como cofactor en varias enzimas y factor regulador del agua en vegetales
(Figura 5). Se presentaron en el afluente una media de 0,12 cmoles kg-1, en
laguna de oxidación 0,16 cmoles kg-1 y en el efluente 0,10 cmoles kg-1, valores
considerados como bajos en casi la totalidad de las muestras (< 0,20 cmoles kg-1)
(IGAC, 2013).

Figura 5. Valores de potasio (cmoles kg-1) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente.

El cuarto ión analizado fue el sodio (Figura 6), también con valores medios
considerados como muy bajos (< 0,30 cmoles kg-1) y sin diferencias entre los sitios
de muestreo.

61
Figura 6. Valores de sodio (cmoles kg-1) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

En lo que se refiere al fósforo, corresponde al que está disuelto en la solución del


suelo y/o sedimento y que las plantas pueden adsorber, pues sólo una pequeña
cantidad está disponible para estas en cualquier momento dado. Se debe
considerar también lo que reportan Alves y Baccarin (2005), quienes establecen
que el 66% del fósforo aportado por la raciones alimenticias en sistemas
intensivos de peces llega al sedimento, el 11% se disuelve en el agua y el 23%
restante es incorporado por los peces cultivados.

El fósforo disponible presentó diferencias significativas entre los sitios de muestreo


(Figura 7); de un promedio de 17,0 mg kg-1en el afluente, valor considerado medio
por hallarse dentro del rango de 15 a 40 mg kg-1, hay un incremento significativo
hasta los 169,66 mg kg-1, valor que se califica como muy alto (> 100 mg kg-1) en la
laguna de oxidación; en la zona de descarga o efluente, la reducción fue
importante, con media de 65,76 mg kg-1, pero aún considerada alta por ser mayor
a 40 mg kg-1 (IGAC, 2013).

62
Figura 7. Valores de fósforo disponible (mg kg-1) obtenidos en sedimento de
afluente, laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan
diferencias significativas (p<0.05).

La saturación de bases en el afluente presentó una media de 77,9% calificada


como alta por ser mayor del 50%; en la laguna de oxidación y en el efluente, los
promedios se clasifican como bajos (< 35%) (IGAC, 2013). Se encontraron
diferencias significativas entre los tres sitios de muestreo (Figura 8). Para suelos
de la región de Guasca (perfil de suelo CC -183), la saturación de bases puede
oscilar entre 35 y 90%, considerada como media-alta, lo que se relaciona con la
influencia de la composición del suelo y el registro obtenido en el afluente (IGAC,
2014).

Figura 8. Valores de saturación de bases (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan diferencias
significativas (p<0.05).

63
Con el parámetro de bases totales (BT), entendido como la sumatoria de los iones
intercambiables del sedimento, específicamente calcio, magnesio, potasio y sodio,
no se presentó diferencia significativa entre los sitios de muestreo. Los niveles
similares de estos elementos dentro del sedimento, indican que la operación de la
granja no altera su concentración, es decir que para este caso en particular no hay
un efecto negativo sobre la calidad del efluente (Figura 9).

Figura 9. Valores de bases totales (cmoles kg-1) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente.

El carbono orgánico (CO) y la materia orgánica (MO) son parámetros


estrechamente relacionados, pues se considera que la materia orgánica en el
sedimento es cercana al 50% de carbono orgánico. Para clima frío, los valores de
carbono orgánico en afluente y efluente se consideran como bajos por ser
menores a 2,9%. En la laguna de oxidación, la media fue del 7,86%, que es medio
al encontrarse dentro del rango de 2,9 a 8,1%; en el tercer muestreo de este sitio
se obtuvo un registro de 8,7% considerado como alto (IGAC, 2013) (Figura 10).

64
Figura 10. Valores de carbono orgánico (%) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan diferencias
significativas (p<0.05).

La materia orgánica (MO) estuvo entre 0,51% y 0,85% para el afluente, 13,49% a
16,53% para laguna de oxidación y de 2,85% a 3,61% para el efluente. En el
afluente, la media de 0,69% indica un suelo mineral con baja MO; en la laguna de
oxidación, la media de 14,94% es propia de un suelo mineral con fuerte tendencia
a suelo orgánico con zonas anaerobias (> 15%) y en el efluente, con media de
3,10%, se trata de un suelo mineral con moderada materia orgánica (Boyd, 2002)
(Figura 11).

Figura 11. Valores de materia orgánica (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan diferencias
significativas (p<0.05).

Uno de los principales parámetros a controlar en los procesos de degradación de


la materia orgánica es la relación C:N, la que se entiende como la fracción de

65
carbono orgánico frente a la de nitrógeno. Casi la totalidad del nitrógeno presente
en un residuo orgánico es biodegradable y disponible. Con el carbono orgánico
ocurre la situación es inversa puesuna gran parte se engloba en compuestos no
biodegradables. La relación C:N indica el grado de maduración y calidad de las
sustancias orgánicas o húmicas que resultan de la síntesis de restos orgánicos
vegetales o animales y que se acumulan en el sedimento; se considera un valor
óptimo entre 12 y 20 (Figura 12).

Figura 12. Valores de relación C:N obtenidos en sedimento de afluente, laguna de


oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan diferencias
significativas (p<0.05).

Se presentaron diferencias significativas entre los diferentes sitios de muestreo. La


media de 12,47 en el afluente indica un mayor grado de mineralización respecto a
la laguna de oxidación y el efluente. Se puede postular que para suelos
superficiales o sedimentos los valores basados en materia orgánica se hallan
dentro de límites que oscilan entre 8:1 y 15:1 (promedio de 10:1) rango que se
encontró en este trabajo.

El pH del sedimento es considerado como una de las principales variables de


caracterización, pues define muchos procesos químicos que tienen lugar en el
sustrato. El afluente, con media de 5,8, y el efluente, con media de 5.6, se pueden
considerar medianamente ácidos (rango de 5,6 a 6,0) (IGAC, 2013); el pH en la
laguna de oxidación (media de 5,36) es fuertemente ácido (Figura 13).

66
Figura 13. Valores de pH obtenidos en sedimento de afluente, laguna de
oxidación y efluente.

La textura de un suelo o sedimento corresponde a la proporción en la que se


encuentran distribuidas las partículas elementales que lo pueden conformar; se
clasifica en 3 grandes grupos: arena, limo y arcilla. Para arena y limo se
pesentaron diferencias significativas entre los sitios, mientras que estas no se
determinaron para arcilla (Figuras 14, 15 y 16). La arena representó más del 50%
de la composición del sedimento, sin importar su origen, seguida de limo y de
arcilla. Entre tanto una mezcla similar entre arcilla y limo fue observada en la
composición del sedimento en la laguna de oxidación; otra mezcla entre arena y
limo con predomino de arena, se presenta en el efluente. La arena presentó el
mayor valor en el afluente (media 88,83%), con un valor intermedio en el efluente
(82,03%) y el menor en la laguna de oxidación (media 51,33%).

Figura 14. Valores de granulometría de arena (%) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan
diferencias significativas (p<0.05).

67
Figura 15. Valores de granulometría de limo (%) obtenidos en sedimento de
afluente, laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan
diferencias significativas (p<0.05).

Figura 16. Valores de granulometría de arcilla (%) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente.

2.3.2. Pérdidas por alimentación

Los resultados obtenidos en las mediciones efectuadas sobre las canaletas se


presentan en la tabla 9.

68
Tabla 9. Estimación de la cantidad (g día-1) y proporción (%) del alimento no
consumido en canaletas de alevinaje de trucha arco iris.

Unidad Cantidad LT Alimento Alimento no Alimento no


de (cm) ofrecido consumido consumido
alevinos (g día-1) (g día-1) (%)
Canaleta B2 6.000 4,5-5,0 396,2 30,92 7,80
Canaleta B2 15.000 3,5-4,5 728,0 14,86 2,04
Canaleta B2 9.300 4,5-5,5 178,0 19,81 11,12
Canaleta B3 10.000 4,0-4,5 396,2 7,66 1,93
Canaleta B3 9.950 4,5-5,5 416,0 11,29 2,71
Canaleta B3 7.923 5,0-6,0 178,0 28,58 16,05

En la estimación del alimento no consumido realizado sobre alevinos se estableció


un valor mínimo de 1,9% y un máximo de 16%, lo cual concide con registros que
indican que este tipo de pérdidas se ubican entre el 2 y el 12%, con un máximo del
20% (Vásquez, 2008). La población de peces en la granja durante los dos
primeros muestreos se mantuvo relativamente constante; en el tercer muestreo se
presentó un incremento de casi 100.000 unidades, representadas por el ingreso
de ovas y larvas en fase de reabsorción. La relación de individuos presentes en
cada uno de los momentos de muestreo se resume en la tabla 10.

Tabla 10. Población estimada de individuos durante los muestreos realizados.

Unidad No. individuos Observaciones


Incubación 0 No hay ovas en incubación
Larvicultura 0 No hay larvas en reabsorción
Alevinaje I 105.000 Alevinos entre 3.0 y 4.0 cm LT
Alevinaje II 200.000 Alevinos entre 4.0 y 6.0 cm LT
Levante 20.000 Juveniles entre 6.0 y 15 cm LT
Ceba 11.740 Truchas entre 15 cm LT hasta sacrificio
TOTALES 336.740
Unidad No. individuos Observaciones
Incubación 0 No hay ovas en incubación
Larvicultura 100.000 Larvas en reabsorción
Alevinaje I 120.000 Alevinos entre 3.0 y 4.0 cm LT
Alevinaje II 64.400 Alevinos entre 4.0 y 6.0 cm LT
Levante 19.800 Juveniles entre 6.0 y 15 cm LT
Ceba 11.690 Truchas entre 15 cm LT hasta sacrificio
TOTALES 315.890
Unidad No. individuos Observaciones
Incubación 11.478 Ovas nacionales en incubación
Larvicultura 120.000 Larvas en reabsorción
Alevinaje I 100.000 Alevinos entre 3.0 y 4.0 cm LT
Alevinaje II 145.968 Alevinos entre 4.0 y 6.0 cm LT
Levante 19.650 Juveniles entre 6.0 y 15 cm LT
Ceba 11.660 Truchas entre 15 cm LT hasta sacrificio

69
TOTALES 408.756

2.4 Discusión

Las diferencias significativas encontradas en la Capacidad de Intercambio


Catiónico (CIC) presentó el mayor valor en la laguna de oxidación, lo que se
puede relacionar con los superiores porcentajes de contenido de arcilla, en cuanto
estas dado que están cargadas negativamente; los suelos con una mayor cantidad
de arcillas exhiben una superior capacidad de intercambio catiónico, lo que
también ocurre con elevado contenido de materia orgánica, aumentando su CIC.
Lo anterior concuerda con lo establecido por Mojica y Villaneda (2001) sobre
sedimentos con alto contenido de arcilla, materia orgánica muy fina y olor
característico a descomposición y un tamaño de partícula inferior a 0,002 mm, que
fue precisamente la textura que se presentó a nivel de laguna de oxidación. De
otro lado, los altos registros para CIC en este sitio también se relacionan por la
lenta descomposición de los residuos vegetales y animales en condiciones de
bajas temperaturas, indudablemente ligada a la materia orgánica (IGAC, 2013).

Con los valores de los iones intercambiables del sedimento (calcio, magnesio,
potasio y sodio), no se presentaron diferencias significativas entre los sitios de
muestreo; estos son elementos que se encuentran disponibles como cationes de
intercambio, los que son adsorbidos por las cargas negativas de las partículas
arcillosas y la materia orgánica. De igual manera pueden intercambiar con otros
cationes en el agua circundante y encontrarse parcialmente en el medio (Parra y
Espinosa, 2008). Los registros obtenidos en los sitios de muestreo, presentaron
valores ligeramente mayores en la laguna de oxidación (especificamente con
magnesio y potasio), lo que también se relaciona directamente con el alto
contenido de arcillas que presenta esta zona. En general los suelos del perfil CC -
183 corresponden taxonómicamente a suelos llamados Typic humaquepts, que
tienen bajo contenido de bases totales, es decir valores menores a 15 cmoles kg-1
(IGAC, 2014) lo que concuerda con los registros encontrados.

El fósforo disponible es considerado como un macronutriente que se halla disuelto


en la solución del sedimento y puede ser adsorbido por las plantas. Presentó
variaciones drásticas, estadísticamente significativas, con el mayor valor en la
laguna de oxidación. Es de presumir entonces que este tiene su origen, además
del que ingresa normalmente desde la fuente (en baja concentración), con el que
corresponde al alimento concentrado no consumido, las heces y mortalidad, entre
otros. Este fósforo se precipita rápidamente formando compuestos con otros
elementos químicos del sedimento, preferentemente calcio, hierro y aluminio. Sin
duda se puede afirmar que la operación productiva de la granja influye en la
concentración del elemento en el sedimento, pero con el diseño y el
funcionamiento de la laguna de oxidación se logra reducir la concentración en el
efluente hasta calificaciones de nivel medio, o incluso cercano a bajo tal como se

70
refleja con el valor obtenido durante el segundo muestreo (42,8 mg kg-1). El valor
de 65,76±27,47 mg kg-1 de fósforo en el efluente, es decir el fósforo que sale,
puede ser también atribuido a que los fosfatos son arrastrados por el agua en
laguna de oxidación y por esto no precipitan en el sedimento, haciéndolo a nivel
de efluente. La absorción o liberación de fósforo en los sedimentos, depende de la
oxido-reducción determinada entre otros; por el pH y el oxígeno en la interfase
agua-sedimento.

Posteriormente, el fósforo puede resuspenderse por acción bacterial y es


aprovechado por plantas macrofitas en la laguna de oxidación y por el bajo
fitoplancton que normalmente se presenta en aguas de baja temperatura; el
excedente regresa al sedimento para formar parte de la materia orgánica, donde
su disponibilidad depende del pH. Como lo explican Yossa et al. (2011), en la
laguna de oxidación probablemente este fósforo se encuentra representado en
tres fracciones: el disuelto y disponible para las plantas acuáticas; la fracción lábil
donde se adsorbe en partículas de arcilla o materia orgánica y forma compuestos
tipo hidróxido de aluminio e hidróxido de hierro que liberan iones fosfato y,
finalmente, como una fracción no lábil que representa compuestos fosforados que
se mineralizan y no están disponibles en ningún momento.

El fósforo inorgánico se clasifica de acuerdo a su disponibilidad para vegetales


(mediata o inmediata) en soluble, insoluble e intercambiable. La forma soluble es
aprovechable para las plantas en forma inmediata, como fosfatos en la solución
del sedimento. Su concentración es baja y fluctúa entre 0,20 y 0,50 mg L-1
(Stevenson y Cole, 1999). Estas referencias no coinciden con lo encontrado, pues
el fósforo disponible a nivel del afluente (sedimento aparentemente sin alteración),
se presentó en concentraciones entre 17,0 mg kg-1 y 31,1 mg kg-1 (promedio de
25,13 mg kg-1), las que se consideran como media (IGAC, 2013). Estas diferencias
se deben a que las primeras, se encuentran en unidades de volumen para agua;
mientras que las segundas se expresan en unidades de volumen para sedimento;
así tendría que determinarse las equivalencias entre unas y otras.

Para la región en la que se localiza la granja se reporta el perfil del suelo


clasificado como CC -183 (IGAC, 2014), el cual debería ser pobre en fósforo
disponible, con niveles entre 1 y 8 mg kg-1. Ahora, bien, el registro encontrado en
el afluente, considerado como medio, revela que se presenta un incremento del
elemento, lo que posiblemente se explica por el uso de fertilizantes agrícolas en la
parte alta del río Siecha, donde existe una importante actividad agrícola.

En estudios realizados en aguas cálidas con cachama blanca, Piaractus


brachypomus, por Hernández et al. (2010), se determinó el comportamiento del
fósforo disponible (ortofosfato) en las unidades de cultivo. Encontraron valores
para sedimento (en el departamento del Casanare) de 42,7 ppm a 50,6 ppm
(afluente), 60,58 ppm a 68,43 ppm (laguna de oxidación) y 16,10 ppm a 30,8 ppm
(efluente); en otra finca (departamento del Meta) los registros fueron 23,1 ppm a

71
29,1 ppm (efluente), 25,5 ppm a 82,9 ppm (laguna de oxidación) y 21,0 ppm a 79,9
ppm (efluente), lo que evidenciaría que el fósforo disponible no tiene un efecto
acumulativo durante la fase de cultivo de los peces.

Los resultados obtenidos en estas granjas y los obtenidos en el presente trabajo,


indican que, tanto en el agua como en el sedimento, la cantidad de fósforo debería
disminuir en el efluente, quedando la mayor cantidad en el sedimento de la laguna
de oxidación (o, de ser el caso, en estanques), bien sea en forma orgánica o
inorgánica. La adsorción y liberación de fósforo por el sedimento de estanques no
se considera una fuente importante del mismo al agua, porque el fósforo
adsorbido es muy insoluble. Sedimentos que tienden a tener un pH cercano a la
neutralidad y no a la acidez, como ocurre con lo encontrado, poseen una menor
capacidad de adsorber fósforo y una mayor tendencia a liberarlo, con respecto a
suelos ácidos (Boyd, 1995). Sin embargo los sedimentos neutros pueden eliminar
fósforo a partir del agua, es decir no son considerados como una fuente de
fósforo.

La concentración de fósforo en el sedimento de estanques cultivados con Lepomis


spp. e Ictalurus punctatus en Auburn, Alabama, varió entre 78 a 944 mg kg-1, con
un promedio de 217 mg kg-1 (Thunjai et al. 2004). Este registro parece ser más
cercano a lo que se pudo determinar en el sedimento de la laguna de oxidación,
donde se obtuvo un valor mínimo de 114,0 mg kg-1 y un valor máximo de 206,0 mg
kg-1. Se trata de especies (bagre de canal y trucha arco iris) de peces carnívoros
y requieren de un alto tenor de proteína en la dieta, el que se basa precisamente
en la harina de pescado, rica en fósforo. En ambos casos, las concentraciones de
fósforo que se encuentra en el sedimento se consideran altas, lo que tiene
explicación por el ingreso del mismo vía alimento exógeno. Se menciona que
cerca de 2/3 del fósforo que ingresa por causa de la alimentación, se acumula en
el sedimento y sólo una pequeña cantidad es soluble en agua (Boyd et al. 1995);
los valores determinados para la la laguna de oxidación se explican por lo anterior,
actuando de forma equivalente a un estanque en tierra, pero sin contener peces.

Debe también considerarse que el alimento que se ofrece a los peces es el mayor
aportante de nutrientes, especialmente fósforo, al sistema y tanto la porción no
consumida como la no asimilada entran al ciclo biogeoquímico del estanque de
producción; igualmente las lluvias contribuyen con una pequeña cantidad del
fósforo total presente en las aguas superficiales de estanques y lagunas de
sedimentación (Saldias et al. 2002); esto se debe a que el agua lluvia se percola a
través de roca y suelo y puede disolver pequeñas cantidades de fosfatos, a una
concentración cercana a los 3 microgramos L-1 (Rodríguez y Anzola, 2001). El
fósforo es considerado como el nutriente de mayor importancia en los fenómenos
de eutrofización, razón de peso para buscar estrategias que busquen reducir su
concentración en las zonas de descarga o efluente, buscando mejorar la calidad
de los cuerpos de agua receptores (Dayton y Basta, 2005).

72
La disponibilidad de fósforo en estanques ubicados en zonas lateriticas
suramericanas es generalmente baja, lo que es atribuido a la alta capacidad de
fijación que se da en este tipo de suelos. El pH ácido y la alta presencia de hierro y
aluminio en estos, aceleran su transformación desde una mayor cantidad de
fósforo a hierro insoluble y fosfato de aluminio (Chattopadhyay et al. 2003). Esta
circunstancia puede también relacionarse con las condiciones que fueron
observadas en el sedimento de la laguna de oxidación, el que registró los valores
más bajos de pH (5,6, 5,3 y 5,3), por lo que eventualmente tendría mayor
capacidad para fijar fósforo.

Al respecto del fósforo en cultivo de camarón marino, Penseng (2007) registra


altos niveles en los efluentes de los estanques pero que una parte es adsorbida
directamente por el sedimento, lo que causa un aumento de la concentración,
especialmente en la capa superficial. La evaluación revela, con base en la
descarga medida en un ciclo, que bajo esas condiciones puede llegar a ser
cercano a las 43 t de fósforo por año. Aún con la comprobación de la importante
cantidad de nutrientes no utilizados, se confirman los beneficios ambientales que
tiene el disponer de lagunas de oxidación para el manejo de las aguas residuales.
En el presente caso, el tránsito del agua por la laguna redujo en un 39% la
concentración del fósforo entre los sedimentos de la estructura (169,66 mg kg-1, o
muy alta) y los que se encuentran en el efluente (65,76 mg kg-1, o alta). No
obstante la importante reducción, es claro que la laguna existente requiere de
opciones de manejo adicionales para lograr minimizar los efectos que se originan
por causa del fósforo.

Como se anotó, con la saturación de bases también se demostró la existencia de


diferencias significativas entre los sitios de muestreo, con el mayor valor medio en
el el afluente y los menores (iguales entre sí) en la laguna de oxidación y el
efluente. La relación que existe a nivel edafológico entre la saturación de bases y
el pH del sedimento (Castro y Gómez, 2010) se demostró en este caso, con
correspondencia entre uno y otro en los lugares de muestreo; indica que los sitios
de intercambio para algunas partículas de suelo están dominados por iones poco
ácidos; los registros obtenidos a nivel de laguna de oxidación con media de pH de
5,36, considerado como fuertemente ácido (es decir bajo), se relacionaron
directamente con una media de 12,33% de saturación de bases que también se
considera baja.

Con las bases totales (BT), que corresponden a la de los iones intercambiables
como calcio, magnesio, potasio y sodio en el sedimento, no se presentaron
diferencias significativas. Los cuatro elementos se encuentran con mayor
disponibilidad en forma de iones de intercambio en partículas arcillosas y materia
orgánica, razón que explica el mayor valor obtenido en la laguna de oxidación
(media 4,63), respecto a los encontrados en afluente (4,46) y efluente (2,83).

73
El carbono orgánico (CO) y la materia orgánica (MO) son parámetros muy
relacionados entre sí; el carbono orgánico en el afluente y efluente fue bajo,
mientras en la laguna de oxidación se obtuvo un valor medio y la materia orgánica
sigue una tendencia similar.

La media de 0,69% en el afluente se considera como un valor muy bajo, siendo


un sustrato no apto para el buen crecimiento de bentos y con tendencia a ser de
carácter más mineral. El valor en la laguna de oxidación (14,94%) indica un
exceso de matería orgánica, siendo un sedimento propenso a presentar zonas
anaeróbicas; finalmente, la media de 3,10% en el efluente indica que se trata de
un sustrato mineral con moderada MO, lo cual puede ser aceptable en estanques
piscícolas de aguas cálidas, cuando se suplementa con alimentación exógena
(Yossa et. al 2011). La baja temperatura del trópico alto puede también influir en
los valores que fueron medidos como altos en materia orgánica del sedimento, en
cuanto se disminuye la actividad de la microbionta produciendo una lenta
mineralización del material orgánico, aún dentro de la columna de agua. Según
IGAC (2014), el horizonte A del perfil de suelo CC -183 posee elevado contenido
de carbono orgánico, causado por la lenta descomposición de los residuos
orgánicos en condiciones de baja temperatura, como la que se presenta en este
caso; no coincide esto con el registro del afluente (0,69%, o muy bajo), pero que
puede entenderse por el continuo lavado del sedimento en el lecho del río, el cual
sin duda arrastra la MO.

Los aportes de materia orgánica que se dan al medio por el efluente variaron entre
2,85% y 3,61%; para este caso puntual la MO descargada al ambiente fue de
mayor magnitud que la ingresó a través del afluente, pero inferior a la que se
encontró en la laguna de oxidación. Los valores del efluente, de acuerdo con Boyd
(2008), indican que la materia orgánica se encuentra en proceso de mineralización
(por ser menor al 10%). Los suelos orgánicos tienen entre 15 a 20% de carbono
orgánico, es decir MO entre 30 a 40%; estos suelos no son buenos para la
piscicultura en estanques en tierra y se deberían evitar (Boyd et al. 2002). Para el
presente caso, los mayores valores se obtuvieron en la laguna de oxidación
(13,49% a 16,53%), registros que indican no ser nocivos para la actividad, si se
tiene en cuenta que las lagunas de oxidación no se utilizan para el cultivo de
peces.

Las concentraciones de materia orgánica en el sedimento de estanques en tierra o


lagunas de oxidación, no siguen una tendencia de continuo aumento cuando se
mantienen constantes las prácticas piscícolas, de especie, de siembra, de
recambio de agua, de cantidad de aireación mecánica y del tratamiento del suelo
de fondo; la entrada anual de materia orgánica y la tasa de descomposición de la
misma, también seguirán siendo constantes (Avnimelech et al. 1984).

El valor de la relación C:N fue significativamente superior en el afluente, mientras


que en laguna y efluente fueron iguales. Sin embargo, todos los registros

74
obtenidos se hayan dentro del rango 8:1 a 15:1, con un promedio de 10:1; se dice
que un valor óptimo para que un lodo sea usado como acondicionador de suelos
agrícolas, oscila entre 12 y 20 (Hickman y Whitney, 1992). La media de la relación
C:N para la laguna de oxidación fue 10,58, valor cercano al que se considera
como óptimo (12 a 20); la efectividad o no del acondicionador proveniente de
lodos de aguas servidas de tipo agropecuario, varía con la cantidad agregada y su
relación C:N. Finalmente se dice que la relación C:N de la materia orgánica que se
agrega al sedimento es importante para la disponibilidad del nitrógeno y la tasa de
descomposición de esta materia orgánica. La competencia por disponibilidad del
nitrógeno en el sedimento ocurre cuando la materia orgánica con alta relación C:N,
es incorporada al mismo suelo de fondo o sedimento.

La relación C: N en sedimento superficial de tres granjas piscícolas de los Llanos


Orientales, fue reportada por Yossa y Ortega (2013), para la primera, la relación
presentó rango entre 8 -11:1, la segunda entre 8 -10:1 y la tercera entre 9 -11:1;
no hubo diferencias significativas (p> 0.05) entre las granjas; teniendo en cuenta
estos valores y los valores de este estudio (medias de 12,47, 10,58 y 10,65), se
puede considerar que independientemente del clima, gran parte de la materia
orgánica depositada en los sedimentos, posiblemente tiene su origen en el
material orgánico alóctono, mostrando una tendencia algo mayor en zonas frías.

El valor de pH fue el mismo para los sitios de muestreo y se consideran aptos para
la producción piscícola; como fue mencionado, se considera importante para el
manejo de estanques, pues modifica la solubilidad de los minerales (Hernández et
al. 2009). El nivel de pH puede ser afectado por la concentración de CO2 en el
agua y también se relaciona con la hora del día. Así, por ejemplo, a nivel del
afluente (5,80) se supone entonces una baja producción de CO2, en lo que influye
que no haga parte directa de la producción piscícola, la hora del muestreo y la
naturaleza oligotrófica que caracterizan a este tipo de sistemas (Rodríguez y
Anzola, 2001) originando una conocida relación inversa que obedece a que < CO2
> pH, es decir que la presencia de dióxido de carbono acentúa la acidez del agua.

El análisis granulométrico realizado a los sedimentos para determinar la textura


del suelo de fondo, se relaciona con la afinidad de absorción para sustancias
adicionadas a los estanques o que llegan a la laguna de oxidación. El afluente,
con media de 88,83% de arena, se clasifica como un sedimento de clase textural
arenosa; el de la laguna de oxidación se cataloga como sedimento textural franco-
arenoso y, finalmente, el efluente, con media de 82,03% para arena y media de
10,46% para limo, entra en la categoría de sedimento textural arenoso-franco
(IGAC, 2013; Mojica y Villaneda, 2001).

Entre sedimentos removidos y no removidos en estanques cultivados con bagre


canal y carpa común, Brady (1990) encuentra que la densidad de partículas oscila
entre 2,65 y 2,84 g cm-3 y que la práctica de eliminación de los sedimentos no
influye en la densidad. La densidad aparente depende de la compactación y

75
disminuye a medida que el promedio de tamaño de partículas es menor. Lo
anterior concuerda con lo obtenido, donde la arena constituyó más del 50% de la
composición en todos los sedimentos; por ser partículas de gran tamaño y, por
tanto, mayor densidad, presentan la tasa más alta de deposición en el fondo.

Por el contrario, las arcillas (partículas con menor tamaño y densidad), se


presentaron reducidos niveles de composición porcentual en afluente y efluente;
sin diferencias significativas, la cantidad de arcillas fue ligeramente superior en la
laguna de oxidación, lo que puede relacionarse con la alta Capacidad de
Intercambio Catiónico de 36,76 cmoles kg-1, (mayor a 20), que a su vez se
relaciona con el buen contenido de arcilla asociada a la fina materia orgánica
presente en este sitio (IGAC, 2013), obedeciendo al perfil de depocisión de arena
en el fondo, limo en la capa media y arcilla en la capa superior. A nivel de afluente,
afluente y laguna, estadísticamente no se presentaron diferencias en el contenido
de arcillas; la posible causa de una mayor cantidad de arcillas en la laguna de
oxidación, es que en ésta el flujo de agua es menor que en el afluente y en el
efluente, favoreciendo así la precipitación de partículas de menor tamaño.

Con el limo ocurre lo mismo en términos de nivel de concentración que con las
arcillas, pero en este caso si hay diferencias, mostrando mayor valor la laguna de
oxidación, que lo retiene eficientemente; tanto así que al efluente llega la misma
cantidad que ingresa con el afluente (estadísticamente hablando). Es decir, para
estos parámetros la laguna opera bien y lo que se pudiese producir se debe a los
efectos operativos, sin generar impacto.

Sobre las pérdidas estimadas de alimento ofrecido, se deben tener en cuenta


tanto aspectos relacionados con la calidad misma de los concentrados utilizados
como los que tienen que ver con las prácticas de alimentación que se aplican en la
granja. Es un hecho que en el país hay una limitación importante respecto al
número de referencias disponibles para las diferentes etapas de desarrollo de los
peces en cultivo, situación que no es exclusiva para truchas (por lo general se
cuenta con tamaños y formlación para “iniciación”, “levante” y “engorde”); en
países con mayores niveles de producción y desarrollo de la actividad se tiene
acceso a tamaños de grano o pellet que, incluso, pueden ajustarse de forma
semanal. En la práctica, esta circunstancia genera que no necesariamente el tipo
de concentrado suministrado sea consistente con el que el organismo requiere en
términos de eficiencia productiva y que, por tanto, se pierda efectividad.en el
suministro de las cantidades reales que deben ser ofrecidas a cada unidad
productiva. Un complemento de lo anterior se tiene en las conversiones que
registran las diferentes casas comerciales para sus balanceados; en general todas
son superiores a 1, indicando que existe una fracción no aprovechada, que puede
ser más o menos importante, que definitivamente llega al efluente por diferentes
vías.

76
El resumen de lo expuesto deriva en que, al final, las prácticas de alimentación
que se aplican en las fincas se adaptan a estas dos circunstancias y, de alguna
manera, puede darse que ocurra una afectación ambiental que, indirectamente, se
genere por los mismos productores.

Referente a lo encontrado, se debe anotar que aparentemente no hay una relación


clara entre el número de peces y el porcentaje de alimento no consumido en cada
momento del muestreo; parece ser, sin embargo, que hay una menor pérdida
cuanto más peces hay dentro de las canaletas, lo que tiene una explicación más
de manejo que de tipo biologico. Como en esta fase el suministro es ad libitum (a
voluntad), se observa que hay una tendencia a ofrecer la misma cantidad por
canal (en cuanto la frecuencia de suministro es alta), independientemente del
número de peces presente.

La práctica de alimentación que se tiene implementada en la granja es ad libitum


para la etapa de inicación, en términos de manejo es una opción válida, pero es
común que pueda generar una significativa cantidad de alimento no consumido,
precisamente por causa de los factores anteriormente mencionados; es claro
también que alimentar a voluntad requiere de experiencia en el manejo y
comportamiento de los peces, situación que no siempre se da dentro del personal
con la responsabilidad de la alimentación. Por tanto, resulta interesante
puntualizar que un factor de contaminación (representado por el porcentaje de
alimento no consumido) se puede asociar tanto a la falta de manejo de densidades
similares en las unidades productivas como el que para estas etapas no se utilicen
tablas de alimentación. Los datos obtenidos reflejan la tendencia a perder menos
alimento cuantos más animales estén dentro de una canaleta.

Es claro inferir que la optimización en el método de alimentación es un factor clave


para reducir la generación de sedimentos en estanques y lagunas de oxidación y
también reducir los costos por alimentación (Cho, 2006) y, cuanto menos de
manera periódica, se debe conservar la opción se suministro manual dentro de las
rutinas, con el fin de reducir las pérdidas de alimento. Igualmente, según Bock et
al. (2006), la baja digestibilidad de las dietas incrementa la carga de los efluentes
en los sistemas, dando como resultado mayores contenidos de nutrientes en las
heces; así, la alimentación en piscicultura tiene una relación directa con la calidad
del agua en los efluentes derivados del cultivo.

Se ejemplifica lo anterior con el caso particular del fósforo. Se tiene que el


contenido de fósforo en la harina de pescado es del 3,81% y la exigencia
nutricional de las truchas asciende al 0,60% (NRC, 1993). La digestibilidad
aparente del fósforo (% de P total) en la harina de pescado oscila entre el 66 y
74%, lo que significa un aporte en la dieta mayor del que requieren y pueden
digerir en un nivel aceptable, redundando en un aporte al medio acuático (agua o
sedimento).

77
Al final, resultó ser clara la relación entre el número de individuos en un momento
dado y la variación en alguno de los parámetros analizados. Durante el tercer
muestreo, el fósforo disponible en la laguna de oxidación presentó el mayor valor
(206,0 mg kg-1) cuando la población en la granja superó los 400.000 individuos.
Caso similar ocurrió con la materia orgánica para el mismo sitio durante el tercer
muestreo, con la mayor proporción en contenido (16,53%). Esto puede asociarse
con una mayor producción de heces y posiblemente con mayor cantidad de
materia orgánica generada al emplearse más unidades de manejo.

2.5 Conclusiones

En la caracterización, mediante análisis general, de los sedimentos evaluados en


una explotación que combina la obtención de alevinos y truchas de consumo, se
demostró la existencia de diferencias en seis de los doce parámetros
considerados; la variación en la composición que fue observada permite
determinar que las diferencias están claramente asociadas a la operación misma
de la explotación, básicamente por la tipificación y comparación de los sedimentos
en el cauce principal de la fuente hídrica (afluente), la laguna de oxidación que
recibe las aguas utilizadas de toda la granja y el sitio final de descarga (efluente).

La composición diferencial entre los sectores se identificó en los parámetros de


capacidad de intercambio iónico, fósforo disponible, saturación de bases, carbono
orgánico, materia orgánica, la relación C:N y la granulometría del sedimento. En
los componentes generales en los que no hubo diferencias entre los sitios, se
tienen calcio, magnesio, sodio, potasio, bases totales y el pH.

La existencia de una laguna de oxidación previa a la descarga tiene efectos


favorables en términos ambientales, aún cuando la efectividad de la misma puede
ser mejorada, lo que se sustenta en que la concentración de algunos de los
parámetros difiere entre los contenidos de ingreso y los que finalmente se
presentan en el efluente. En particular, es relevante que la disminución en fósforo
disponible y materia orgánica son indicadores importantes de la mitigación que se
alcanza con estructuras de este tipo. Las características de diseño y manejo de
una laguna de oxidación para este tipo de actividad aún requieren ser precisadas
tanto en lo que se refiere a sus características técnicas como en lo relacionado
con aspectos de normativa ambiental.

La dinámica general de parámetros indicativos de degradación debe ser


contemplada en evaluaciones de más largo plazo. La relación que pueda darse en
las variaciones de los parámetros con las cantidades de peces en producción es
un factor de análisis relevante.

2.6 Bibliografía

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81
3. Caracterización puntual de los sedimentos producidos en una
explotación intensiva de trucha arco iris (Oncorhynchus mykiss
Walbaum, 1792).

Resumen

La actividad piscícola genera impactos que están relacionados con los niveles en
la que esta se desarrolla. El recurso hídrico es sensible y esto ubica a la actividad
en un escenario no ajeno a controversia. Específicamente en producción de
truchas, se tiene que por ser sistemas de tipo intensivo, se suponen importantes
variaciones en la calidad del agua utilizada en los procesos. Sobre tres muestreos
realizados con diferencia de 45 días entre ellos, se analizaron de forma puntual
nueve parámetros para sedimento de afluente, laguna de oxidación y efluente en
una granja mixta de producción de trucha arco iris, ubicada en el municipio de
Guasca, Cundinamarca. Para complementar análisis de carácter general previos,
en este caso el análisis puntual incluyó los parámetros de pH, nitrógeno total,
nitrógeno amoniacal, fósforo total, fósforo como P2O5, sólidos totales, acidez total,
nitratos y nitritos. Factores como el espejo de agua y el área destinada como
laguna de oxidación fueron igualmente determinados. Los valores medidos fueron
comparados mediante análisis de varianza de una vía con α = 0,05 como nivel de
significancia y cuando fue necesario se realizó una prueba de Tukey para precisar
las diferencias. El único parámetro que presentó diferencias sginifcativas entre los
sitios de muestreo fue el de sólidos totales, los cual se relaciona con aspectos
como velocidad de decantación de sólidos y tipo de suelo donde se ubica la
granja; los registros confirman el favorable efecto ambiental que significa disponer
de una laguna de oxidación. En general, entendiendo procesos de manejo previo,
la aptitud de los sedimentos para ser utilizados en actividades agrícolas se sugiere
como una opión válida para la disposición definitiva de los sedimentos producidos.
Finalmente, se discute sobre el diseño, la forma y el área de una laguna de
oxidación, teniendo en cuenta las particularidades de explotaciones de peces en
zonas frías.

.Palabras clave: sedimentos, análisis puntual, Oncorhynchus mykiss, trucha arco


iris, piscicultura.

3.1 Introducción

El análisis del sedimento juega un papel importante en los estudios ambientales,


ya que son receptores de elementos que no permanecen fijos en el suelo. Son
reciclados por agentes biológicos y químicos y funcionan bien sea como fuente o
como reserva de muchos de los nutrientes esenciales involucrados en procesos
de eutrofización (Chanratchakool et al. 1995). Los sedimentos provenientes de la
actividad piscicola presentan altos contenidos de materia orgánica y nitrógeno y su

82
uso como acondicionadores mejora las condiciones del suelo, en relación con la
fertilización y la promoción de actividad microbiana, si las concentraciones de
metales pesados no sobrepasan límites criticos. Se pueden aplicar en suelos
degradados, preservando y mejorando sus características, evitando su deterioro,
es decir actuando como un buen acondicionador.

En el país se cuenta con muy pocos referentes sobre el tema. Caracterizaciones y


análisis sobre sedimentos en estanques piscícolas se tienen con Hernández et al.
(2009), quienes evaluaron condiciones de concentración de materia orgánica, pH,
macronutrientes y micronutrientes en granjas localizadas en los municipios de
Villanueva (Casanare) y Lejanías (Meta), dedicadas al cultivo de cachama blanca.
Entre los resultados más relevantes están las diferencias encontradas para
parámetros como pH, fósforo, calcio, cobre, hierro, zinc, boro y azufre.

A nivel normativo, es una exigencia ambiental que todas las granjas piscícolas
deban disponer de un área para la recolección de los sedimentos que generan; en
esta se promueve un almacenamiento por intervalos de tiempo variables, de
manera que se permita y faciliten los procesos normales de degradación orgánica.
En Colombia, las Corporaciones Autónomas Regionales no disponen de manuales
de manejo en este sentido y su control se limita a constatar la existencia de
lagunas de sedimentación.

Desde una perspectiva que pretende establecer los primeros registros sobre
producciones piscícolas de tipo intensivo, el objetivo de este trabajo estuvo dirigido
a analizar la composición puntual de sedimentos presentes en afluente, laguna de
oxidación y efluente en un sistema mixto de cultivo de trucha arco iris. Se trata de
definir una línea base que genere elementos para sustentar posibles
procedimientos para la adecuada disposición, uso y manejo del material
sedimentado que se produce en este tipo de explotaciones.

3.2 Materiales y métodos

3.2.1 Localización
Las muestras de sedimento a nivel de afluente, laguna de oxidación y efluente, se
obtuvieron en una granja especializada en la producción comercial de semilla y
truchas de consumo ubicada en la Vereda Santa Ana Alta, municipio de Guasca
(Cundinamarca); se localiza a 2850 msnm, utilizando como fuente de agua al río
Siecha del que se deriva un caudal de 80 L s-1 y mantiene una temperatura media
de 11 0C.

3.2.2. Recolección de muestras

83
Esta granja opera de forma mixta en términos de producción de truchas (alevinos
y carne) y, además, dispone de infraestructura para la captación de las aguas
servidas. Se tomaron 3 muestras compuestas del sedimento de origen en la fuente
hídrica (afluente), 3 muestras compuestas del sedimento en la laguna de oxidación
y 3 muestras compuestas del sedimento en el efluente o zona de descarga; los
muestreos se realizaron cada 45 días durante el período de septiembre a
diciembre de 2013.

Para afluente y efluente las muestras se recolectaron desde varios puntos en las
orillas y, en el caso de la laguna de oxidación, desde un bote plástico; en todos los
muestreos se empleó para la colecta un tubo de PVC con diámetro de 3” y 150 cm
de longitud, al cual se le adaptó otro tubo de 20 cm con orificios para eliminación
de excedentes de agua.

Para cada muestreo y para los 3 sitios definidos, la captura del sedimento fue
superficial, en ruta de zig-zag. Se tomaron 12 submuestras a lo largo y ancho del
afluente, 12 submuestras para la laguna de oxidación y 12 submuestras del
efluente; posteriormente fueron homogenizadas de manera independiente dentro
de un recipiente plástico de forma que se obtuvo una única muestra compuesta
para cada sitio. En todos los casos la colecta se realizó a una profundidad entre
los 0 y los 10 cm.

Con el fin de determinar el espejo de agua y el volumen total contenido, se realizó


la medición en área (m2) de todas las unidades de producción que se encontraban
en operación dentro de la granja durante el periodo de trabajo.

3.2.3 Manejo de las muestras

Cada muestra con aproximadamente 2 kg de peso provino de la mezcla


representativa de 5 kg de sedimento. El material recolectado fue extendido para
escurrimiento y secado durante 5 horas. Posteriormente fue depositado dentro de
bolsas plásticas selladas, con identificación completa indicando el sitio de origen y
la fecha de recolección. Cada muestra se mantuvo en nevera térmica hasta su
transporte a laboratorio, en donde se adelantaron los correspondientes análisis.

3.2.4 Datos experimentales

Los registros finales obtenidos resultaron de 3 muestreos realizados con diferencia


de 45 días. Para cada uno se obtuvo, por duplicado, muestras representativas de
sedimento de los tres sectores definidos (afluente, laguna de oxidación y efluente).
En todos los casos se midieron las siguientes variables:

• pH: medida de la acidez o alcalinidad en los suelos. Se define como el


logaritmo (base 10) negativo de la actividad de los iones hidronio (H+ o más

84
precisamente H3) en una solución. El pH es considerado como una de las
principales variables en los suelos, pues es condicionador de varios procesos
químicos.

• Nitrógeno total: corresponde a la suma total del nitrógeno que incluyen las
formas de nitrógeno orgánico, nitrógeno amoniacal, nitratos (NO3) y amonio
(NH3).

• Nitrógeno amoniacal: se trata del nitrógeno que se encuentra retenido en las


arcillas del suelo. Es la suma de los nitrógenos presentes en los compuestos
amonio (NH3) y amoniaco (NH4+).

• Fósforo total: es considerada una medida de la capacidad del suelo para


suministrar fósforo a la solución del suelo; generalmente comprende el fósforo
ligado a todas las fracciones, es decir el fósforo en el complejo arcillo-húmico,
en calcio, en las arcillas y en otros complejos orgánicos; es decir, todas las
formas del fósforo en el suelo que no son disponibles (Castro y Gómez, 2010).

• Fósforo como P2O5: es una forma de fósforo ligado al óxido de fósforo,


conocido como fosfato. Se obtiene mediante combustión directa del fósforo y
oxígeno puro. La solución en agua es un ácido fuerte. Es higroscópico, muy
soluble en agua, con la que reacciona para formar ácido ortofosfórico (H3PO4).

• Sólidos totales: son los sólidos que contiene la fuente y que en la práctica
corresponden a la sumatoria de los sólidos en suspensión y los sólidos
solubles. Se expresa en g/100g y se determina por el método analítico de la
NTC Gravimetría.

• Acidez total: hace referencia a la acidez intercambiable, la cual está dada por
el aluminio más el hidrógeno en el complejo arcilllo-húmico del suelo y que,
dependiendo del pH, se relaciona con el grado de toxicidad del aluminio
(Sánchez, com. per. 2014).

• Nitratos (NO3): compuestos que están presentes naturalmente en suelos,


agua, vegetales y tejidos animales. Los niveles en suelos agrícolas y en agua
se ven incrementados por la utilización de fertilizantes nitrogenados.

• Nitritos (NO2): son compuestos formados biológicamente por la acción de


bacterias nitrificantes, en un estadio intermedio en la formación de nitratos. La
concentración del mismo en agua y vegetales es generalmente baja y se
considera un indicador del grado de contaminación en los suelos (Lora, 2010).

3.2.5 Análisis estadístico

85
El acercamiento incial al análisis fue de tipo exploratorio y descriptivo, con el fin
de determinar el comportamiento de los datos en cada variable y precisar posibles
tendencias y relaciones. Para el diseño experimental, las variables respuesta
fueron la serie de parámetros de composición del sedimento en lo que se refiere a
un análisis puntual; el valor de cada parámetro fue determinado por triplicado.

La comparación entre los registros se realizó mediante Análisis de Varianza de un


factor (parámetro) con tres niveles (sitios de muestreo). En caso de presentarse,
las diferencias fueron precisadas mediante una prueba de Tukey. La comparación
entre los registros de cada parámetro en los tres tiempos se hizo mediante un
análisis de medias. En todos los casos se estableció la significancia en α = 0,05.
La robustez del modelo se probó en independencia (Durban - Watson), varianza
común (Levene) y normalidad (Shapiro - Wilk). El manejo de los datos se efectuó
utilizando el programa estadístico de SPSS y las aplicaciones de Excel.

3.3 Resultados

3.3.1 Caracterización puntual


Los muestreos efectuados sobre sedimento de afluente, laguna de oxidación y
efluente se realizaron durante el último cuatrimestre del año 2013. Los valores del
análisis puntual se obtuvieron para nueve parámetros, registrándose los datos que
se presentan en la tabla 11 y en la tabla 12 se presentan los valores de Anova
para grados de libertad, F y p.

Tabla 11. Valores (media ± DE) del análisis puntual para sedimentos de afluente,
laguna de oxidación y efluente en la granja de producción.

Parámetro Unidad Afluente Laguna Efluente Método analítico


oxidación
pH 5.87± 0.50 5.89 ± 0.41 6.13 ± 0.52 LBC 44
potenciómetro
Nitrógeno g/100g 0.07± 0.00 0.12 ± 0.69 0.33 ± 0.18 Suma de
total nitrógenos
Nitrógeno g/100g < 0.01 < 0.01 < 0.01 NTC 211
amoniacal destilación
Fósforo g/100g 0.06 ± 0.01 0.04 ± 0.01 0.10 ± 0.07 NTC 234
total colorimetría
Fósforo g/100g 0.15 ± 0.02 0.09 ± 0.04 0.22 ± 0.18 NTC 234
total P2O5 colorimetría
Sólidos g/100g 90.15 ± 1.70 23.66 ± 1.83 71.96 ± 9.11 NTC 35
totales gravimetría
Acidez g/100g 0.04 ± 0.02 0.01 ± 0.00 0.05 ± 0.03 LBC 349
total volumetría
Nitratos g/100g 0.00 ± 0.00 0.00 ± 0.00 0.00 ± 0.00 LBC 109

86
colorimetría
Nitritos g/100g 0.00 ± 0.00 0.00 ± 0.00 0.00 ± 0.00 LBC 303
colorimetría

Tabla 12. Valores Anova para grados de libertad, F y p del análisis puntual para
sedimentos de afluente, laguna de oxidación y efluente en la granja de producción.

Parámetro Grados de libertad Valor F Valor p


pH 2 0.060 0.784
Nitrógeno total 2 4.332 0.068
Fósforo total 2 1.245 0.353
Fósforo P2O5 2 0.946 0.439
Sólidos totales 2 118.823 0.000
Acidez total 2 2.049 0.210
Nitritos 2 1.175 0.371

Con el pH, utilizando el método analítico de potenciometría, no se presentaron


diferencias significativas entre los tres sitios de muetreo (Figura 17).

Figura 17. Valores de pH obtenidos en sedimento de afluente, laguna de


oxidación y efluente.

De igual manera, el nitrógeno total, entendido como la suma de nitrógeno


orgánico, nitrógeno amoniacal, nitratos (NO3) y amonio (NH3), no presentó
diferencias significativas entre los sitios de muestreo (Figura 18), si bien se
observa una tendencia al incremento desde el sitio de captación hasta la
descarga.

87
Figura 18. Valores de nitrógeno total (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

Referente al nitrógeno amoniacal, que corresponde a la suma del nitrógeno


presente en amoniaco (NH+4) y amonio (NH3), se obtuvo un único registro para la
granja (0,01 g 100g-1), que se considera bajo y por debajo de los valores máximos
permitidos; lo que indica que la producción en el nivel de la granja no afecta el
nivel del parámetro. El único dato que se pudo obtener para los tres sitios durante
los tiempos de muestreo, indica también que este parámetro es poco detectable
por el método analítico empleado (NTC 211 destilación); este sistema de medición
no fue sensible a las bajas concentraciones en las que aparece el nitrógeno
amoniacal en el sedimento acuícola de los sitios evaluados.

El fósforo total se considera como la capacidad del sedimento para suministrar


fósforo a la solución del mismo; en la finca no se encontraron diferencias
significativas entre los sitios de estudio (0,06 g 100g-1 en afluente, 0,04 g 100g-1 en
laguna de oxidación y 0,10 g 100g-1 en efluente) (Figura 19); esto ratifica que la
concentración de fósforo en la solución de sedimento generalmente es muy baja y
no refleja la cantidad de fósforo (disponible) que las plantas acuáticas pueden
potencialmente absorber para su normal crecimiento. Por tanto, la operación de la
granja no tiene efectos sobre el nivel de fósforo total en el sedimento.

88
Figura 19. Valores de fósforo total (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

El fósforo como P2O5 es una forma de fósforo ligado a un compuesto químico,


como el óxido de fósforo o fosfato. Al calcular el fósforo como óxido de fósforo
(P2O5) el resultado es mayor respecto al fósforo total, pues su peso molecular es
superior; sin embargo siguen una tendencia similar y no se presentaron
diferencias significativas entre los sitios muestreados (Figura 20).

Figura 20. Valores de fósforo como P2O5 (g/100g) obtenidos en sedimento de


afluente, laguna de oxidación y efluente.

El parámetro de sólidos totales hace referencia a los sólidos que se encuentran en


el agua corriente y generalmente comprende el conjunto de los que están en
suspensión y los solubles. Se presentaron diferencias significativas entre los tres
sitios de muestreo, con medias de 90,15 g 100g-1, 23,66 g 100g-1 y 71,96 g 100g-1,
para afluente, laguna de oxidación y efluente respectivamente (Figura 21).

89
Figura 21. Valores de sólidos totales (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente. Barras con letras diferentes expresan diferencias
significativas (p<0.05).

La acidez total o acidez intercambiable se relaciona con el grado de toxicidad del


aluminio, lo que depende del pH. Entre los tres sitios, no se presentaron
diferencias significativas; luego, el cultivo de truchas o nivel de producción de la
finca, no tiene efectos sobre este parámetro (Figura 22).

Figura 22. Valores de acidez total (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente.

A nivel de nitratos y nitritos, los valores encontrados fueron calificados como muy
bajos (medias con tendencia a cero) y no se presentaron diferencias entre los
sitios de muestreo (figuras 23 y 24).

90
Figura 23. Valores de nitratos (g/100g) obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

Figura 24. Valores de nitritos (g/100g) (%) obtenidos en sedimento de afluente,


laguna de oxidación y efluente.

Anterior al primer muestreo, se midieron con cinta métrica, cada una de las
unidades de manejo con que cuenta la granja para su normal funcionamiento,
incluyendo la laguna de oxidación. Las medidas tomadas para cada contenedor
fueron ancho, largo y profundo (Tabla 11).

91
Tabla No. 13. Estimación del espejo de agua y volúmenes de las unidades de
manejo.

Unidad Descripción Cantidad Área Volumen Observaciones


unidad unidad
(m2) (m3)
Incubación Incubadora 3 3,16 0,14 Tipo Heath
Larvicultura Canaleta 12 5,4 1,32 Fibra de vidrio
Alevinaje I Canaleta 10 8,0 2,0 Fibra de vidrio
Alevinaje II Canaleta 16 26,54 11,27 Cemento
Levante Estanque 8 111,62 58,62 Cemento
Engorde Estanque 6 127,94 76,68 Cemento
Totales 55 282,66 150,03
Laguna 1 191,25 95,62 67,66% del área
oxidación total

Como se ve, el área de la laguna de oxidación es de 191,25 m2, lo que equivale al


66,67% del espejo total de agua en la granja de producción.

3.4 Discusión

Con los registros que por segunda vez se tomaron sobre el pH se confirma que no
hay diferencias entre los tres sectores. En general, los registros se aproximan a
valores de 6,0, (ligeramente ácido a neutro), por lo que se presume que existe una
baja alcalinidad total (parámetro no evaluado), situación con la que se podría
inferir cierta estabilidad del pH (Rodríguez y Anzola, 2001). La alcalinidad se
considera una medida de la capacidad de un sistema para nutralizar los ácidos. En
este caso, una baja alcalinidad infiere que el sistema está menos protegido contra
los cambios de pH, por la entrada de suastancias ácidas, por ejemplo las lluvias.

El nitrógeno total mide todo el nitrógeno presente en el sedimento, especialmente


el de sustratos orgánicos y no está disponible para las plantas; solamente cuando
se inicia la mineralización de la materia orgánica, toma formas asimilables por el
fitoplancton como por ejemplo nitritos y nitratos. Para para clima frío y a nivel de
afluente y laguna de oxidación, con medias de 0,07 g 100g-1 y 0,12 g 100g-1
respectivamente, se pueden considerar como valores bajos (< 0,25); a la vez en el
efluente con una media de 0,33 g 100g -1 el valor asume como medio (entre 0,25 a
0,50) (IGAC, 2013).

Los mayores registros de nitrógeno total en el efluente podrían indicar que se trata
de un suelo mineral con moderada materia orgánica (Boyd, 2002), en este caso
con un contenido de MO del 3,10%; igualmente puede tener relación con el
manejo de la alimentación ad libitum, que origina un porcentaje significativo de
alimento no consumido, del que depende la cantidad de amonio y nitritos (Yossa

92
et al. 2011). El uso de tablas reguladas de alimentación, basadas en cargas reales
de biomasa, podría disminuir la magnitud del parámetro y, por tanto, su
concentración en el efluente.

Es evidente que a nivel de laguna de oxidación, este parámetro sigue siendo bajo,
lo que indica que la remoción de nitrógeno es eficiente, posiblemente por la
presencia de plantas macrofitas; sin embargo, a nivel de efluente, el registro
alcanza un valor medio, el crecimiento de macrofitas tambien a nivel de efluente,
se considera parte del tratamiento del mismo; la concentración registrada de 0,33
g 100g -1 no necesariamente tiene un afecto ambiental sobre la la fuente. Los
datos indican que posiblemente, una porción importante del nitrógeno total es
nitrógeno orgánico; así la mayor cantidad de nitrógeno orgánico en el efluente,
puede estar relacionada con la resuspensión de material, por la velocidad del flujo.

En el caso de aguas cálidas, a mayor tasa de aplicación de los fertilizantes, menos


nitrógeno y fósforo son eliminados directamente por los peces (Gross et al. 2000);
el nitrógeno de los fertilizantes que no es eliminado por esta vía, puede ser
incorporado al sedimento como nitrógeno orgánico o se pierde a la atmósfera a
través de la desnitrificación y la volatilización del amoniaco. Esto puede explicar
los bajos niveles de nitrógeno total que se encontraron. Se anota que en el caso
de truchas no hay ingreso adicional por causa de aplicación de fertilizantes.

Referente al nitrógeno amoniacal, el único valor obtenido fue de 0,01 g 100g -1. El
amoniaco ionizado (NH+4), el nitrito (NO2) y el nitrato (NO3) son formas comunes
de nitrógeno inorgánico en sistemas acuáticos y están naturalmente presentes por
causa de la deposición atmosférica en aguas superficiales lóticas, en fuentes
derivadas de las actividades humanas y en la disolución de yacimientos
geológicos ricos en nitrógeno (Camargo y Alonso, 2006). Al contrario del NH+4, la
forma no ionizada (NH3) es de alta toxicidad para los animales acuáticos,
particularmente para peces. El nitrato es poco tóxico y un nivel máximo de 2 mg
NO3 L-1 ha sido propuesto como seguro para organismos acuáticos; además, la
acción de bacterias Nitrobacter, permiten el paso de nitritos (NO2 + ½ O2) a
nitratos (NO3) que son formas asimilables por el fitoplancton (Rodríguez y Anzola,
2001).

Los niveles tóxicos del amoniaco no ionizado en exposiciones de corta duración


varían entre 0,6 y 2,0 mg L-1, con efectos subletales que se manifiestan entre 0,1 y
0,3 mg L-1. El pH y la temperatura regulan la proporción de amoniaco total que
existe en la forma no ionizada (Rodríguez y Anzola, 2001). El aumento del pH y de
la temperatura, incrementan el porcentaje de amoniaco no ionizado y, por
consiguiente, su toxicidad; en este caso, con la combinación de temperatura
reducida (11 °C) y el bajo pH (5,2 a 6,1), los comp uestos nitrogenados presentan
bajas concentraciones.

93
En fósforo total se ha demostrado que dentro de la capa de los primeros 20 cm las
concentraciones poco cambian (Masuda y Boyd, 1994b). Así, el procedimiento
utilizado para extraer sedimento a una profundidad de 10 cm resulta ser válida en
términos de representatividad. Aunque la laguna de oxidación de la granja no es
sometida a un mantenimiento continuo de retiro de los lodos superficiales,
presentó (sin ser significativo) el valor más bajo de fósforo total. Si se generan
disturbios por causa de la limpieza ocasional de vegetación acuática, situación
que posiblemente ayuda a reducir ligeramente el nivel de fósforo total presente. A
nivel del efluente, el aumento en la magnitud del parámetro puede estar
relacionado con el moderado contenido de materia orgánica que presenta este
sitio (media del 3,10%).

Los rangos que normalmente se encuentran en estanques cultivados con bagre


canal, son concentraciones de fósforo total que oscilan entre 0,9 y 2,2 g 100g-1 y
para fósforo disponible concentraciones entre 462 y 1.712 mg kg-1, a un pH que
estuvo entre 6,4 y 7,4. Masuda y Boyd (1994ª), encuentran que el secado de
estanques entre cosechas puede reducir las concentraciones de fósforo; cuando
los suelos de los estanques son secados y cultivados de nuevo, se promueve el
contacto con el oxígeno atmosférico, lo que mejora la actividad microbiana y la
química oxidativa de la materia orgánica y otras sustancias reducidas.

La forma P2O5 del fósforo se calcula con base en un compuesto de óxido, pero
muestra una tendencia que es prácticamente igual a la del fósforo total; si bien los
valores son superiores, existe igualdad estadística entre los tres sectores. En
general los registros reportados coinciden con Ozbay y Boyd (2004), en dónde se
postula que por lo general a nivel de efluentes, existe un ligero aumento del
fósforo total, es decir que no presenta una significativa reducción. Mucho de este
fósforo total se asocia a materia orgánica particulada, plancton vivo, detrito y
partículas minerales; así, la reducción de fósforo total es similar a la de sólidos
decantados, sólidos suspendidos y turbidez. El fósforo soluble puede reducirse
luego de 48 horas, debido a la adsorción de éste por las partículas minerales
decantadas del sedimento; mientras el incremento se debe a la liberación por la
degradación de la materia orgánica, por bacterias y otros organismos
heterotróficos.

Referente a sólidos totales, el dato en el afluente indica que la carga natural de la


fuente fue elevada, por lo menos durante el periodo de muestreo; también sugiere
que la existencia de la laguna de oxidación deriva en un tiempo de retención
aceptable para decantar una elevada proporción de sólidos, tanto los provenientes
del río mismo como los que se adicionan por causa de la operación de la finca.
Por lo anterior, sería lógico suponer una carga en el efluente menor a la que fue
encontrada, lo que no se obtuvo; es factible que, si bien hay remoción efectiva y
significativa con respecto al afluente, la laguna puede presentar un nivel de

94
colmatación que hace que se pierda eficiencia en la captura de sólidos. También
la razón de encontar más sólidos totales en el afluente y en el afluente, respecto a
laguna de oxidación, puede estar en la velocidad de la corriente en donde fue
medido, el flujo de agua es mayor en afluente y efluente donde puede resuspender
sedimentos del fondo, respecto a la laguna

Sobre sólidos totales Brinker y Rosch (2005) establecen que el tiempo de


residencia del agua en un estanque de sedimentación (laguna de oxidación para
este caso), es uno de los factores que condiciona directamente el tamaño y el
número de unidades que son necesarias para tratar el efluente. La sedimentación
es un proceso mecánico eficiente para la remoción de sólidos en suspensión, si
bien es solamente una parte del tratamiento del efluente. Deben ser evitadas
situaciones que promuevan la fragmentación de las partículas suspendidas, lo que
por ejemplo ocurre con turbulencia que origina el uso de aireadores. En el caso de
la granja, los datos confirman la eficiencia de la laguna de oxidación, sitio en el
que se obtuvo el menor registro de sólidos totales (media de 23,66 g 100g -1). Si
bien en el efluente la carga se incrementa, esta continúa siendo significativamente
menor que la registrada para la que ingresa por el afluente.

Para el parámetro, se concluye que se presenta una ventaja real, en términos de


mejoramiento de la calidad de agua, con la existencia de producciones de peces.
Se trata de una situación interesante no abordada en la normativa vigente. En
efecto, los sólidos en suspensión consituyen uno de los parámetros bajo los
cuales se calculan los costos por concepto de Tasa Retributiva establecidos por
las Corporaciones Autónomas Regionales; es decir, la legislación contempla el
cobro en el caso de incremento por causa de la explotación, pero no lo hace
cuando el ejercicio de la actividad demuestra ofrecer beneficios ambientales. La
misma situación se presenta con los parámetros de oxígeno disuelto y la demanda
bioquímica de oxígeno, los que son también la base para los costos que tiene el
uso de las fuentes hídricas.

Para acidez total, todos los valores se clasifican (IGAC, 2013) como bajos (entre
0,01 y 0,08 g 100g -1), lo que tiene relación los registros de pH en el sedimento.
Valores superiores a 5,5 constituyen el nivel crítico en el cual el aluminio es
retenido por las arcillas y aumenta su grado de toxicidad. Puntualmente en la
laguna de oxidación, con media de pH de 5,36 (la más baja), se obtuvo una media
de acidez total de 0,016 g 100g -1 (también la más baja), lo que confirma la directa
relación existente entre los dos parámetros.

Los compuestos nitogenados como el amoniaco ionizado (NH+4), el nitrito (NO2) y


el nitrato (NO3) son las formas más comunes del nitrógeno inorgánico disuelto en
ecosistemas acuáticos (Camargo y Alonso, 2006); el valor de 2 mg NO3,
considerado seguro para especies acuáticas, es muy superior al encontrado de
0,002 g 100g -1, indicando que no representa un problema de tipo biológico. Los

95
nitritos (NO2) se producen por la acción de bacterias nitrificantes, en un estadio
intermedio en la formación de los nitratos. Su concentración en el agua tiende a
ser baja y se considera un indicador del grado de contaminación en sedimentos.
Todos los registros, sin importar su origen (afluente, laguna de oxidación y
efluente), fueron clasificados como muy bajos (valores entre 0,00001 y 0,00015 g
100g -1) lo que podría interpretarse por las mismas razones de los nitratos, es decir
por la combinación entre un nulo aporte de fertilizantes y un alto nivel de oxígeno
disuelto (> 8,0 ppm). El alto recambio de agua en las unidades de manejo, que
bien puede aproximarse a 1,5 veces por hora en la granja, es factor que coadyuva
en la reducción de los compuestos nitrogenados hasta concentraciones que no se
consideran tóxicas.

Rodríguez y Anzola (2001), establecen que la concentración permitida de nitritos


en aguas frías debe ser inferior a 0,10 mg L-1; en este caso los registros obtenidos
se categorizaron como muy bajos. En general, para los compuestos nitrogenados
de interés en piscicultura como amonio, nitrito y nitrato, la concentración aumenta
y se vuelve tóxica bajo condiciones de alta temperatura del agua, pH alcalino y
bajo oxígeno disuelto, condiciones que no se presentan en la granja.

En términos ambientales, en los referentes que se establecen para las condiciones


nacionales, las lagunas de oxidación en granjas piscícolas deben permitir la
retención del 80% de sólidos en suspensión, poseer un área cercana al 10% del
espejo total de agua y una profundidad mínima de 2 metros, con el fin de
garantizar un tiempo de retención entre 3 y 5 días (Departamento del Meta, Guía
Ambiental Piscícola, 2007). En estas estructuras se recomienda la siembra de
especies vegetales como el buchón y el helecho de agua, con el fin de disminuir
la concentración de sólidos y la absorción de elementos como nitrógeno y fósforo.
Es claro que se trata de condicionamientos demasiado generales, en los que no
se hace claridad entre los tipos de producción que caracterizan las especies de
clima frío o cálido. En aguas cálidas, para especies como cachama y tilapia se
dispone de estanques en tierra con gran área, bajos recambios de agua, uso de
abonos y fertilizantes, alta acumulación de sedimentos en los estanques, por lo
que en la práctica cada unidad opera como una laguna de oxidación;
contrariamente, en aguas frías y para trucha arco iris en específico, se dispone de
estanques construidos en material inerte, con pequeñas áreas, alta tasa de
recambio y la acumulación de sedimentos es reducida por las constantes rutinas
de limpieza.

El tiempo de retención en la laguna de oxidación, se calculó midiendo con cinta


métrica la laguna (22,5 m de largo x 8,5 m de ancho) y se obtuvo un área de
191,25 m2; luego en varios sitios se midió la profundidad, obteniéndose un
promedio de 0,5 m. Con este registro se estimó el volumen de la laguna (191,25
m2 x 0,5 m = 95,62 m3). Sí la entrada de agua a la granja es de 80 L s-1, el tiempo
que tarda en llenarse e iniciar el recambio es de 20 minutos aproximadamente.
Pardo et al (2006) establecen una retención mínima de 48 horas, con el fin de

96
alcanzar el que en la zona de descarga la cantidad de sólidos en suspensión no
superen los 30 mg L-1. El tiempo de retención que fue medido tiene origen en el
reducido volumen que temporalmente se presenta en la laguna de oxidación,
debido a su baja profundidad (0,5 m), lo que es debido al nivel de colmatación que
actualmente se presenta por el sedimento acumulado. De esto se infiere que el
área que debe tener una laguna, con base en la relación con el espejo de agua de
una granja dada, puede no ser el criterio más importante en el diseño; la
combinación entre área y volumen almacenado puede ser una directriz más
conveniente, aunque se reconoce que se trata de un índice que debe ser
técnicamente establecido y normativamente precisado, todo con base en las
carácterísticas actuales de desarrollo piscicola nacional.

Boyd y Gross (1998) demuestran que la concentración de sólidos totales, fósforo


total, turbidez, demanda bioquímica de oxígeno, nitrógeno amoniacal y nitrógeno
total, pueden reducirse en el efluente mediante una adecuada sedimentación. La
eliminación del 75% o más de sólidos totales y de fósforo total, la reducción del
40% en la demanda bioquímica de oxígeno y la turbidez, se producen dentro de
las 8 primeras horas de colmatación.

El uso de sedimentos piscícolas para la actividad agrícola, debe cumplir con


requisitos que lo habilitan como acondicionador de suelos; la relación C:N cercana
a 30:1 es uno fundamental, pues es clave para la disponibilidad del nitrógeno y la
tasa de descomposición de la materia orgánica; esta relación en el suelo,
comúnmente se halla en un rango de 8:1 a 15:1, con un promedio de 10:1. Para
este parámetro, el sedimento de la laguna de oxidación tuvo un valor medio de 10,
58, lo cual lo haría apto para su uso como acondicionador; los suelos con alto
contenido de materia orgánica tienen mejoradas sus condiciones físicas, por estas
razones algunas marcas de acondicionadores de suelo, prueban y disponen de la
materia orgánica para mejorar las propiedades físicas de los suelos (Klute, 1986).
Adicionalmente, para los cuatro nutrientes a saber calcio, magnesio, potasio y
sodio, este tipo de sedimento revela su buena calidad para ser utilizado como
acondicionador de suelos, lo que se busca es que el compuesto agregado libere
algunos nutrientes disponibles, más no que contarreste una deficiencia, labor esta
asumida por los fertilizantes (Sánchez, com. per. 2014).

En países con legislaciones más estrictas se utiliza la aplicación de los lodos


residuales sobre suelos agrícolas (Banks, 2004), con lo que se mejoran la
estructura, porosidad y permeablilidad, además de una adecuada cantidad de
materia orgánica incorporada. Según Hickman y Whitney (1992), esto ha generado
un excelente mercado para los biosólidos o sedimentos ya trabajados, con un bien
de valor económico y con potencial interesante, lo que cumple postulados de
verdadera sustentabilidad ambiental. El uso de biosólidos provenientes de cultivos
de salmónidos no afecta significativamente las propiedades químicas del suelo,
aumentando el fósforo y algunas bases en la caso de aplicar altas dosis (Salazar
et al. 2005). Olson (1992), al respecto indica que, previa establización, los

97
sedimentos provenientes de salmonicultura se pueden utilizar como buenos
recuperadores del suelo.

Métodos de aprovechamiento de este tipo de sedimentos para agricultura o suelos


degradados, especificando las etapas de manejo, en términos de temperaturas de
digestión, tiempos de retención, formación de biosólidos y forma de aplicación se
describen en EAAB (2014). Los protocolos de Teuber et al. (2007) y Celis (2007)
son más específicos en lo referente a manejo para acondicionar suelos con base
en sedimentos provenientes de producciones intensivas de salmones; en estos
casos, los suelos tratados incluyeron cultivos de papa, maíz y pasturas; los
autores puntualizan sobre cantidades y modos de aplicación, incluyendo las
relaciones de los tratamientos con la productividad, la cual demostró ser
incrementada.

Finalmente sobre las estructuras destinadas para la captura de sólidos producidos


en piscicultura, se debe reconocer la existencia de vacios importantes en lo que se
refiere a diseño, contrucción y regulación legal. Yossa et al. (2011), aclaran incluso
el concepto y en cuanto al interior de las denominadas lagunas de oxidación,
ocurren procesos de descomposición de materia orgánica, remoción de patógenos
y menor descarga de nutrientes a los cuerpos receptores se deben denominar
como lagunas de estabilización. Aglutinando criterios de Olson (1992), Tebbut
(2008) y Wedler (1998) las siguientes son directrices que deben ser tenidas en
cuenta para el montaje de este tipo de estructuras en granjas específicamente
destinadas a la producción de truchas:

a) Área mínima del 30% del espejo total de agua en la explotación


b) Profundidad media entre 1 y 2 metros
c) Forma rectangular, en una relación 3:1
d) El mayor tiempo de retención posible
e) Tasa promedio de acumulación de sólidos de 0,3 m3 año-1
f) Promover una concentración uniforme de sólidos a medida que el flujo ingresa
a la zona de sedimentación
g) Evitar la resuspensión de sólidos
h) Varios contenedores en serie
i) Presencia de macrófitas

3.5 Conclusiones

De los nueve parámetros que hicieron parte del análisis puntual de los
sedimentos, solo para sólidos totales se demostró la existencia de diferencias
estadísticamente significativas; para los restantes (pH, nitrógeno total, nitrógeno
amoniacal, fósforo total, fósforo como P2O5, acidez total, nitratos y nitritos), la
igualdad estadística entre afluente, laguna de oxidación y efluente, indica que la

98
operación productiva no afectó estas variables, lo que ambientalmente se
considera positivo.

En el caso de sólidos totales, los datos confirman la eficiencia de la laguna de


oxidación, lugar en el que los valores fueron significativamente menores. La
adecuada sedimentación en esta estructura se considera uno de los métodos
válidos para tratamiento de los efluentes. Registros que no son consistentes
evidencian la necesidad de validar los esquemas teóricos que han sido planteados
para precisar las características de este tipo de instalaciones en la producción
piscícola.

Los valores que caracterizan el sedimento en la laguna de oxidación, sobre


macronutrientes, compuestos orgánicos y fósforo disponible, se encuentran en
rangos que permiten inferir que se trata de un interesante material, con
posibilidades para ser utilizado como acondicionador en suelos agrícolas o
restaurador de suelos erosionados; las limitaciones que se presentan con
parámetros como pH y fósforo disponible, son modificables para promover su uso
sin restricciones.

Con un adecuado proceso, este tipo de sedimentos se puede constituir en una


alternativa económica complementaria a la que corresponde a la actividad
principal de producción; se convierte también en un elemento de manejo con
implicaciones en la reducción de costos asociados a las actuales tasas retributivas
que, ligadas a las concesiones sobre el recurso hídrico, establecen las
Corporaciones Autonomas Regionales en el país.

3.6 Bibliografía

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101
ANEXO 1. Valores de análisis general obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

Parámetro Afluente Laguna Efluente Método analítico


oxidación
CIC (cmoles/kg)* 4,5 38,6 10,4 Acetato de amonio 1N
4,8 38,9 9,8 y pH 7,0
5,8 32,8 10,7
Ca (cmoles/kg) 1,7 4,2 1,1 Acetato de amonio 1N
5,6 3,8 3,4 y pH 7,0
3,6 3,0 2,4
Mg (cmoles/kg) 0,44 0,55 0,24 Acetato de amonio 1N
0,67 0,72 0,36 y pH 7,0
0,76 0,37 0,35
K (cmoles/kg) 0,15 0,32 0,16 Acetato de amonio 1N
0,08 0,08 0,04 y pH 7,0
0,13 0,09 0,12
Na (cmoles/kg) 0,15 0,36 0,20 Acetato de amonio 1N
0,12 0,12 0,04 y pH 7,0
0,12 0,08 0,08
Fósforo disponible (mg/kg) 27,3 189,0 99,0 Bray II
17,0 114,0 42,8
31,1 206,0 55,5
Saturación de bases % 54,2 14,1 16,3 (B.T./CIC x 100)
100,0 12,1 39,2
79,5 10,8 27,6
Bases Totales (B.T.) 2,4 5,4 1,7 (Ca + Mg + K + Na)
6,4 4,7 3,8
4,6 3,5 3,0
Carbono Orgánico % 0,27 7,1 1,5 Walkley-Black
(C.O.) 0,38 7,8 1,5
0,45 8,7 1,9
Materia Orgánica % (M.O.) 0,51 13,49 2,85 C.O. x 1,9
0,72 14,82 2,85
0,85 16,53 3,61
Relación C:N 13,50 10,59 10,71 (N calculado como
12,66 10,54 10,71 M.O./20)
11,25 10,62 10,55
pH 5,8 5,6 5,9 Potenciómetro
5,9 5,3 5,5 relación suelo/agua
5,7 5,2 5,4 1:1

102
(Continuación) Valores de análisis general obtenidos en sedimento de
afluente, laguna de oxidación y efluente.

Granulometría Arena % 93,9 46,1 83,9


82,3 51,4 82,0 Bouyoucos
90,3 57,7 80,2
Granulometría Limo % 2,0 46,4 11,9
7,9 33,3 8,1 Bouyoucos
5,3 35,2 11,4
Granulometría Arcilla % 4,1 7,5 4,2
9,8 15,3 9,9 Bouyoucos
4,4 7,1 8,4
* cmoles/kg = miliequivalente/100g

103
ANEXO 2. Valores de análisis puntual obtenidos en sedimento de afluente,
laguna de oxidación y efluente.

Parámetro Afluente Laguna Efluente Método analítico


oxidación
pH 6,0 5,87 5,79 LBC 44 potenciómetro
5,32 6,32 5,86
6,31 5,50 6,74
Nitrógeno total 0,07 0,16 0,25 Suma de nitrógenos
(g/100g) 0,07 0,16 0,20
0,07 0,04 0,55
Nitrógeno amoniacal 0,01 0,01 0,01 NTC 211 destilación
(g/100g) 0,01 0,01 0,01
0,01 0,01 0,01
Fósforo total (g/100g) 0,06 0,05 0,05 NTC 234 colorimetría
0,06 0,05 0,06
0,08 0,02 0,19
Fósforo total P2O5 0,15 0,13 0,11 NTC 234 colorimetría
(g/100g) 0,13 0,12 0,12
0,18 0,04 0,44
Sólidos totales 90,94 21,85 77,12 NTC 35 gravimetría
(g/100g) 88,20 25,53 61,43
91,33 23,61 76,33
Acidez total (g/100g) 0,05 0,02 0,05 LBC 349 volumetría
0,02 0,01 0,02
0,06 0,02 0,08
Nitratos (g/100g) 0,0020 0,0005 0,0005 LBC 109 colorimetría
0,0005 0,0005 0,0005
0,006 0,001 0,002
Nitritos (g/100g) 0,00002 0,00001 0,00010 LBC 303 colorimetría
0,00001 0,00001 0,00001
0,00002 0,00015 0,0003

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