El Suicidio

Es natural en el hombre relacionarse con su entorno y socializar, pero cuando estos

vínculos se rompen se piensa que cierto problema no tiene solución y la persona se
encuentra sumergida en un estado de depresión total. Entonces, ve en el suicidio una
salida fácil y rápida para acabar con tanto malestar emocional.
El peor día de mi vida.
Los hechos tienen inicio una tarde de enero, Erick se encontraba en su trabajo, era el
empleado de una empresa muy reconocida. Mientras tomaba un café y escribía en su
ordenador, su jefe le pidió que se acercara a su oficina, parecía que tenía algo
importante que decirle.
Jefe de Erick (Sr. Tomas): Erick ven aquí por favor, tengo que comunicarte algo. (En
un tono de voz fuerte)
El tono con el cual dijo aquellas palabras dejó sorprendido a Erick, y sin más que
hacer, se dirigió hacia allí.
Jefe de Erick (Sr. Tomas): seré muy franco contigo, vamos a hacer una reducción del
personal y en la lista que tenemos el primero eres tú, lo siento mucho.
Erick: Pero… ¿cómo? llevo 5 años en esta empresa, y jamás he faltado, ¿Porque me
hacen esto a mí?
Jefe de Erick (Sr. Tomas): Lo siento mucho Erick, pero es una decisión que viene
desde arriba, no es en contra tuya ni contra tu trabajo en estos años, pero las cosas
no vienen muy bien y es necesario hacer esto. Te pido que tomes tus cosas y te vayas
de inmediato.
Erick sin por decir una palabra se dirigió a su escrito recogió sus cosas y se fue.
Mientras caminaba por la Avenida San Felipe, dirigiéndose a su casa, entro a un bar a
tomarse algunos tragos para aliviar la pena que le estaba carcomiendo la cabeza. Se
quedo un par de horas allí, mientras escuchaba música en el lugar.
Momentos más tarde, miro su reloj que marcaban las 8:30 PM y en estado de
ebriedad decidió marcharse.
Al llegar a su departamento, encontró una carta pegada con una cinta en la puerta, la
cual decía en su portada “te quiero”. La abrió y comenzó su lectura. “Erick me he
marchado, no puedo seguir así, estamos perdidos los dos y no quiero más esta vida
para mí, ojalá que puedas encontrar algo que te reavive el alma, yo haré lo mismo. No
eres tú, soy yo. Firma: Laura
Erick: lo que me faltaba, que me abandonara ella, ¡Maldita perra!
Puso las llaves sobre la cerradura y se quedó inmóvil unos instantes, todo lo que le
había ocurrido en el día le estaba tronando como truenos en su mente, sin pensarlo
dos veces se dirigió hasta su habitación, susurrando lo siguiente: Jamás comprenderé
mi vida, realmente no entiendo porque me suceden estas cosas a mí, ya sé que no
soy el mejor obrador del mundo, pero podría pasarme un suceso que cambiara el
rumbo de mi vida. Seguidamente de una caja que se encontraba debajo de su cama,
saco un revolver, con el cual se efectuó un disparo en la región torácica.
Erick residía en un conjunto de departamentos, por lo qué los habitantes se alarmaron
por el sonido del disparo y recurren hasta el lugar de donde provino el sonido, de
inmediato se dan cuenta de que la puerta de la habitación de su vecino Erick estaba
abierta y al entrar observan una desconsolante escena, Erick estaba tirado en el suelo
y a su alrededor un gran charco de sangre inundaba el lugar.
Desconcertados deciden realizar una llamada al CICPC, órgano que se dirigió
hasta el lugar de los hechos, para realizar las investigaciones pertinentes a lo
ocurrido, en donde protegen el sitio, observan, fotografían y colectan evidencias de
interés criminalístico.
A su vez realizan preguntas a las personas presentes, en busca de algún testigo que
pueda aportar algún factor fundamental para el esclarecimiento del hecho,
posteriormente realizan el levantamiento del cadáver, el cual es trasladado hasta la
Delegación del CICPC a fin de determinar el causante de su muerte.