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Hilario Rodríguez Negrete

Matricula: 125776
Grupo: CF67
ÉTICA Y PRÁCTICA PROFESIONAL
Mtro. Rodolfo Carlos Olivares Hernandez
Actividad de Aprendizaje 2. Resumen: la convivencia ética
Ciudad Madera, Chihuahua a 02 de Diciembre del 2019
¿Por qué la persona humana es considerada un ser relacional y qué
implicaciones tiene esto?

La relación entre el individuo y la sociedad es muy estrecha. El ser humano no existe sin
la relación que mantiene con los demás que le rodean ya que, aunque así no se quiera
todos necesitan compañía de sus congéneres, es algo fundamental para el ser humano.
El punto es entender que la sociedad no existe independientemente del individuo. Todos
vivimos y actuamos dentro de ella y para que todo tenga valor la sociedad debe juntar los
individuos en un esfuerzo cooperativo ya que de esta forma reconocemos que el mundo
no esta en uno solo, si no en las relaciones.
El hombre tiene herramientas para poder vivir en grupo las cuales son psicológicas,
neurológicas y biológicas. Todo esto lo se ha ido desarrollando desde nuestros ancestros
más primitivos, esto nos ha permitido desarrollar habilidades para convivir con otros.
Hay que tomar en cuenta también otro aspecto importante del ser relacional. Cuando el
ser humano se entiende a sí mismo como un ser aislado, comienza a tener problemas
para encontrar su sentido de vida. Claro que este sentido de vida puede (y debe) estar
puesto en nuestra autorrealización, pero sin que esa realización personal se enfoque en
algo que tenga que ver con ayudar a otros, corremos el riesgo de sentirnos solitarios y
vacíos.
Es importante entender que la sociedad no existiría sin los humanos y viceversa. El
humano es un ser social y sin esta relación no se podría considerar una persona ya que
todos dependemos de algún grupo.

¿Qué es el bien común y cómo puede ayudar a construir relaciones


interpersonales armoniosas?
Muchas de las decisiones que tomamos se basan en lo que está bien para nosotros
solamente sin tomar en cuenta a los demás. El bien común es aquello que beneficia a la
sociedad en general.
Si bien no se ha trabajado siempre bajo el mismo concepto la idea del bien común existe
desde las más antiguas ciudades-estado griegas y se extiende hasta la actualidad.
A grandes rasgos podríamos decir que el bien común se define como ciertas condiciones
generales que son igualmente ventajosas para todos.
En la edad media el concepto bien común estuvo en gran medida supeditado (sujeto) a
enseñanzas teologales (sobre dios), y en realidad bajo los sistemas económicos feudales
era difícil que el concepto floreciera de otra manera.
¿Cuáles son las principales actitudes éticas que se ponen en juego al
practicar nuestras relaciones interpersonales?

Lealtad: El término lealtad expresa que una persona que se ha comprometido de alguna
manera con una cuestión sigue comprometida con ella gracias a que media un
sentimiento de respeto y fidelidad hacia dicho compromiso, comunidad, principio moral o
persona.
Solidaridad: En los últimos años este término se ha vuelto muy importante ya que implica
generar un estado de colaboración y cooperación entre un grupo de personas. Es la idea
de que juntos podemos lograr algo importante. Esta incluye también la empatía, por medio
de la cual podemos vernos en otro, comprender sus problemas y entender que debemos
ayudarle y así ayudarnos nosotros también.
Tolerancia: Para lograr la tolerancia primero hay que conocernos nosotros mismos,
aceptarnos con todo y nuestros defectos y con base a esto podemos aceptar y respetar a
los demás. Además, implica que, aunque no estemos de acuerdo con las ideas de los
demás no debemos ofenderlos o discriminarlos.
Honestidad: La honestidad es definida como la imparcialidad y sencillez de conducta. Una
persona honesta procura siempre anteponer la verdad en sus pensamientos, expresiones
y acciones.
Ser honesto es decir la verdad, sin fingimientos ni mentiras. Ser honesto significa elegir no
mentir, robar o engañar de ninguna manera, esto quiere decir que hay que estar
convencido de lo que vamos a hacer y se deben tener argumentos válidos para cada
acción antes de realizarlos.
Respeto: Es tener “la debida consideración” por las creencias de la otra persona, en otras
palabras, poder voltear a mirar lo que otros hacen, dicen o piensan sin desacreditarlos. El
respeto significa escuchar con amabilidad y discreción, y si no estamos de acuerdo,
podemos debatir con calma o simplemente agradecer y retirarnos.
El respeto es la llave de oro de la convivencia, pues se refiere a tratar a otros como
quisiéramos ser tratados.

¿Qué es la responsabilidad social, porqué es importante y qué es la


responsabilidad social empresarial?

La responsabilidad social podríamos definirla como “actuar con preocupación y


sensibilidad, consiente del impacto de sus acciones en los demás, especialmente en los
desfavorecidos.
uno está al interior de la empresa, donde un buen puntaje lo obtienen aquellas que
otorgan beneficios y un muy buen trato a sus empleados, dándoles lugares seguros y
cómodos de trabajo, buenas prestaciones, promocionar la salud y la buena alimentación
entre ellos y asegurándose de que el empleo sea parte de su construcción de sentido de
vida, y no solamente un empleo pesado. Obviamente, esto repercute a la larga en
beneficios para la empresa.
El consumidor y las empresas están cada vez más concienciados de sus respectivas
responsabilidades sociales en calidad de stakeholders del proceso de fabricación,
distribución y venta/consumo. La empresa debe obtener beneficios, pero no a cualquier
costa, u para ellos tendrá que considerar el impacto inmediato y futuro de sus
actuaciones.
La responsabilidad social empresarial se ha enfocado en las grandes corporaciones
cotizadas en las bolsas de valores de los países desarrollados y se ha difundido desde
ese contexto hacia otro tipo de países y empresas. El concepto de responsabilidad social
tiene un contenido en función del poder dominante impregnado en la perspectiva desde la
cual se propone, las propuestas varían por las diferentes teorías competidoras desde las
cuales se aborda y se analiza el fenómeno

¿Qué son la otredad y la alteridad? ¿Por qué debemos ser conscientes


de la otredad, pero también desarrollar la alteridad? ¿De qué manera
este último concepto enaltece la dignidad de la persona?

La otredad genera la idea de individualización de la identidad, que a veces son muy


necesarias para mantener cierta cohesión y cooperatividad entre miembros de un grupo.
Es decir, del mismo modo que cuando nos unimos formalmente a un club o a una
organización la membresía depende de cumplir un conjunto de criterios.
Es la cualidad de pensamiento que se atribuye a alguien o al que es diferente a nosotros
o de nuestro grupo de identidad.
El rostro es una categoría metafísica y ética que el autor utiliza para concebir un tipo de
relación con el Otro compatible con la trascendencia. El rostro es aquí algo distinto de los
rasgos característicos de una persona, que se ofrecen a la mirada. No debe entenderse
en su uso habitual, sino que tiene sentido desde el punto de vista ético.
En cuanto a los modos de relación del yo con el Otro, Levinas rechaza claramente que se
trate de una relación en términos de reciprocidad.
Así mismo, rechaza que se trate de una relación cognoscitiva, o de una relación entre dos
términos que participan de un elemento común. En contraste con el concepto de otredad,
está el de la alteridad. Esta idea implica no solamente la distinción entre “yo” y “el otro”,
sino que también significa alterar entre mi visión del mundo para intentar acomodarla a la
suya.
la alteridad implica tratar de ver desde sus perspectivas, y con esto se reconoce la
dignidad y fuerza de las otras personas, su riqueza y sobre todo una voluntad de
entendimiento que fomenta el diálogo.
El ser humano tiende a reconocer sólo lo que vive dentro de él, y si lo que vemos en el
otro es odio y mentira, es porque eso es a lo que hemos estado acostumbrados toda
nuestra vida. En cuanto nos abrimos a la experiencia y a la posibilidad de que en nosotros
exista amor, comprensión y respeto, encontraremos eso en los demás.
Podemos retomar también la idea de la alteridad que veíamos en el tema anterior, en
donde amar es afirmar al otro, porque al amar a otro, estamos permitiéndole ser distinto, y
al mismo tiempo le respetamos por eso. Es por esta razón que se insiste tanto en que
amar es en realidad querer un bien para otro. El amor como benevolencia y desinterés
consiste en afirmar al otro, querer que el otro crezca y se desarrolle.

Esta forma de amor no refiere al ser amado a las propias necesidades o deseos, sino que
lo afirma en sí mismo, en su alteridad.

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