El ensayo Lefranc es un tipo de ensayo in situ que permite determinar la
permeabilidad de los suelos en el interior de sondeos, ya sea durante la ejecución de este o una vez a finalizada la perforación. Están especialmente indicados para determinar el coeficiente de permeabilidad de suelos permeables o semipermeables como suelos arenosos, limosos o rocas muy fracturadas por debajo del nivel freático, aunque también pueden utilizarse en gravas o suelos arcillosos. Son un tipo de ensayo muy práctico y fácil de realizar en campo, el cual nos dará una idea de la permeabilidad de un nivel o estrato en concreto ya que tiene la ventaja de que se puede ejecutar a la profundidad que se desee y con el espesor que se considere más idóneo. Existen dos procedimientos de ejecución de este tipo de prueba: Ensayos de permeabilidad de carga constante El procedimiento consiste en medir el caudal necesario para mantener un nivel de agua en el interior de un sondeo. Para ello, durante las labores de perforación del sondeo o una vez finalizado este y una vez alcanzada la profundidad deseada, se realizan los siguientes pasos: Maniobra de limpieza para despejar la cavidad de perforación de cualquier fragmento, lodo o derrumbe. Izado de la tubería de revestimiento, habitualmente 1 o 2 m, hasta dejar libre el tramo que se pretende ensayar. Llenado con agua del hueco de perforación y esperar el tiempo suficiente hasta que se libere el posible aire acumulado en los poros y se estabilice el nivel de agua. Una vez estabilizado el nivel de agua, se comienza la prueba Lefranc mediante las lecturas de tiempo y caudal cada 5 minutos y durante un tiempo mínimo de 45 minutos. Si la permeabilidad es elevada, durante los primeros 20 minutos se tomarán medidas cada 1 minuto. Una vez terminada la prueba la permeabilidad de un suelo la permeabilidad de un suelo puede ser determinada mediante la siguiente expresión: K = m·Q/H Donde: K: Coeficiente de permeabilidad m: Coeficiente que depende de las características geométricas del hueco de perforación del sondeo. Q: Caudal de agua H: Altura desde la superficie del agua hasta la profundidad del nivel freático. La constante m pero estos casos puede determinarse mediante la expresión: m= Ln(2h/d) /2·Π·h e Δm=d/8· Π·Hs (válido para h/d>4) Y donde los parámetros geométricos se definen en el siguiente esquema:
Ensayos de permeabilidad de carga variable
El procedimiento es similar al anterior, pero en lugar de medir los caudales necesarios para mantener el nivel de agua constante se mide la velocidad de descenso del nivel de agua en el interior del sondeo. Al igual que en el otro ensayo de permeabilidad in situ debe realizarse la maniobra de limpieza y esperarse el tiempo suficiente antes de comenzar la prueba para que se libere el posible aire que hubiera en los huecos del suelo y se estabilicen las velocidades de los descensos del nivel de agua. De forma análoga a la prueba de permeabilidad de suelo anterior, la formulación que permite calcularlo la permeabilidad es:
Donde los parámetros que rigen esta ecuación quedan representados en el
siguiente esquema: El ensayo de permeabilidad Lefranc de carga constante está más indicado para suelos más permeables mientras que el ensayo de permeabilidad Lefranc de carga variable ofrece mejores resultados en suelos menos permeables. De todos modos, lo recomendable es empezar haciendo un ensayo Lefranc de carga constante y una vez finalizado este, continuar con la prueba de carga variable. De este modo tendríamos dos ensayos en uno y podemos contrastarlas diferencias de permeabilidad entre un ensayo y otro. Ensayo de permeabilidad Lugeon El ensayo Lugeon es el ensayo de permeabilidad para macizos rocosos más empleado en la actualidad en la ingeniería geotécnica. Muy utilizado en las cerradas y vasos de embalses u otras balsas de agua y también en túneles u otras obras subterráneas. La prueba Lugeon se realiza en el interior de sondeos geotécnicos y permite calcular de forma más o menos cuantitativa la permeabilidad in situ de un macizo rocoso fracturado. Debe su nombre en homenaje al geólogo suizo Maurice Lugeon, el cual formuló por primera vez el método en 1933. Inicialmente se diseñó para medir la permeabilidad del terreno en proyectos de presa, principalmente para inyecciones de cemento, pero posteriormente se amplió a otras ramas de la geotecnia. Cabe indicar que en suelos el ensayo más idóneo a realizar es el ensayo de permeabilidad Lefranc ya sea en su variante de carga constante para suelos más permeables o de carga variable para los suelos con una permeabilidad más reducida. Procedimiento prueba Lugeon El ensayo consiste básicamente en inyectar agua a una presión constante de 1 MPa (10 kp/cm2) en un tramo obturando de sondeo durante 10 minutos. Normalmente se ensayan tramos de 5 m los cuales se aíslan del resto de la perforación mediante obturadores. Durante el trascurso del ensayo se va midiendo la admisión de agua. La presión se va aplicando en escalones de carga y descarga de 0, 1, 2, 5 y 10 kp/cm2 y en cada escalón debe mantenerse la presión 10 minutos debiendo alcanzarse siempre la presión de 10 kp/cm2 salvo en rocas blandas o superficiales en las que podría producirse la fracturación hidráulica. La prueba proporciona unos resultados en unidades Lugeon que se corresponden con 1 litro de agua que se absorba por metro de sondeo y por minuto de ensayo. Una unidad Lugeon equivale a una permeabilidad de 10-5 cm/s.