El siu hormonal

El SIU es un dispositivo pequeño, suave, en forma de T, con un reservorio que

contiene la hormona progestina que un profesional médico coloca en la matriz. El
SIU actúa liberando continuamente una dosis baja de la progestina dentro de la
matriz. Ésta hace que el moco del cérvix sea más espeso, lo que dificulta el
movimiento de los espermatozoides para llegar al óvulo y también adelgaza el
recubrimiento del útero. Sin embargo, hay algunos factores de riesgo individuales
que hacen que el SIU no sea recomendable para algunas mujeres. Por lo tanto,
consulta a tu profesional médico con el fin de determinar tu situación individual.

¿Duele cuando te ponen el SIU?

La mayoría de las mujeres tolera bien la colocación de un SIU. Algunas mujeres
pueden tener dolor y mareo después de la colocación, lo cual generalmente se
quita después de descansar un poco. Se pueden tomar analgésicos o aplicar
anestesia local al cérvix uterino antes de la colocación.

¿Qué tan efectivo es el siu?

Con 99.8% de efectividad, estás tan protegida como podrías estarlo por un
método anticonceptivo. Es un gran método para la súper organizada, la
olvidadiza, la viajera frecuente y prácticamente para cualquiera que se ha
propuesto no embarazarse.

¿Tendré síntomas?
Después de la inserción, algunas mujeres pueden tener algo de dolor y mareos.
Suelen ser similares a los cólicos menstruales y se alivian con analgésicos
comunes. Si el dolor persiste, consulta a tu médico. El SIU también puede
reducir el sangrado y el dolor menstrual con el tiempo y puede detener los
periodos por completo.

¿Puede salirse?
El profesional de la salud realizará el procedimiento correcto para asegurarse de
que el SIU quede bien insertado y permanezca en su lugar durante los 3 o 5 años
de uso. Es posible que las contracciones musculares empujen el SIU y lo
desplacen de lugar, de modo que si tienes molestias persistentes después de su
inserción, consulta a tu profesional de la salud de inmediato.

¿Qué desventajas tiene el SIU?

No protege contra VIH/ETS (enfermedades de transmisión sexual). Efectos
secundarios: Algunas mujeres tienen sangrado irregular durante los primeros
meses, dolores de cabeza, acné, sensibilidad en las mamas o cambios de estado
de ánimo, depresión y ansiedad. Puede provocar quistes ováricos.

¿Cuáles son las ventajas del SIU?

El SIU contribuye a mejorar la calidad de vida de la mujer de varias maneras:
brinda anticoncepción de muy alta confiabilidad y debido a la liberación local de
progestina, hace que los sangrados menstruales sean más breves, escasos y
menos dolorosos. Ayuda a prevenir que se presente anemia por sangrados
abundantes.
Chancro Blando
El chancro blando es un enfermedad de transmisión sexual producida por una
bacteria llamada Haemophilus ducrey. Es mucho más frecuente en países del
tercer mundo. En nuestro país suele tratarse de una infección importada, es
decir, adquirida fuera y traída a España.

¿Cómo se adquiere el chancro blando?

El chancro blando se transmite por contacto sexual con una persona infectada.
El tiempo que tarda en manifestarse la enfermedad desde que se ha producido el
contacto sexual (periodo de incubación) oscila entre 1 y 14 días.

Síntomas del chancro blando

La lesión característica del chancro blando es la aparición de una ampolla que
posteriormente se rompe y se transforma en una úlcera en la zona genital (en el
glande o en el escroto en varones y en los labios mayores en mujeres y en la zona
perianal). Frecuentemente aparecen varias úlceras que pueden unirse entre sí.
Las úlceras tienen aspecto de tener pus en su interior, frecuentemente sangran, y
habitualmente son muy dolorosas. Es frecuente que aparezcan a la vez ganglios
en la ingle, generalmente en un único lado, que pueden ser dolorosos y pueden
abrirse a la piel y expulsar pus.

¿Cómo se trata el chancro blando?

El tratamiento del chancro blando se realiza con la administración de una única
dosis de un antibiótico tomado por vía oral (ciprofloxacino o azitromicina) o
mediante una inyección intramuscular (ceftriaxona).

¿Cómo se previene?
El uso de preservativo es la forma más eficaz de evitar cualquier enfermedad de
transmisión sexual. Tras el diagnóstico debe hacerse un estudio de la pareja o de
los posibles contactos sexuales para tratar los casos posibles y evitar que la
enfermedad continúe extendiéndose.