Está en la página 1de 8

En 1912 la Dinastía Qing había sido derrocada, naciendo así la República de China cuyos

primeros años se caracterizaron por las luchas internas, en lo que se conocería como la
era de los señores de la guerra, y por la sumisión del país a Occidente y al Imperio
Japonés, un problema heredado del imperio. El Partido Comunista de China reivindica sus
orígenes en el Movimiento del Cuatro de Mayo de 1919, una oleada de protestas contra la
cada vez mayor influencia japonesa en China. En el Movimiento del Cuatro de Mayo las
ideologías occidentales radicales como el marxismo y el anarquismo ganaron terreno
entre los intelectuales chinos. Chen Duxiu y Li Dazhao estuvieron entre los primeros
intelectuales chinos destacados que apoyaron públicamente el leninismo y la revolución
mundial. Ambos intelectuales consideraron la Revolución de Octubre en Rusia como un
ejemplo a seguir.15 La teoría de Vladimir Lenin de un partido de vanguardia tendría
especial influencia dentro del movimiento comunista chino.16 En el verano de 1919, el
Partido Comunista de la Unión Soviética pone en marcha una política centrada en el
Lejano Oriente y en abril de 1920, la División de Asuntos Exteriores designa a Grigori
Voitinsky encargado de difundir las ideas marxistas en la República de China y el Imperio
de Japón. Shanghái acabaría por convertirse en la sede del Komintern en el Lejano
Oriente. El Congreso Fundacional del PCCh se celebró del 23 al 31 de julio de 1921.17 Ni Li
ni Chen pudieran asistir al primer congreso, lo que no evitó que Chen se convirtiera en el
primer secretario general del partido.

En el contexto de la Guerra civil rusa, los bolcheviques buscaban aliados en Oriente para
hacer frente a Japón, la principal fuerza anticomunista en el este de Rusia. Por ello,
además de fomentar la creación del Partido Comunista Chino, los bolcheviques entablaron
relaciones con el Kuomintang, un partido fundado por Sun Yat-sen, el hombre detrás de la
Revolución de Xinhai de 1911 que provocó el derrocamiento de la Dinastía Qing. El
Kuomintang, o KMT, estaba localizado en el sur de China. El norte del país estaba en
manos del Gobierno de Beiyang, fragmentado en facciones rivales. El 6 de octubre de
1923, el Komintern envió a Mikhail Borodin a Cantón. Eran muchos los que esperaban una
fusión entre el KMT y el PCCh. El Comité Central del partido,18 Stalin,19 y el Komintern20
esperaban que los comunistas acabasen por convertirse en la fuerza dominante dentro del
KMT. Sun Yat-sen logró aliviar las cada vez mayores tensiones entre izquierdistas y
derechistas dentro del KMT pero su prematura muerte en marzo de 1925 en un accidente
aéreo llevó al general Chiang Kai-shek, de ideología derechista, al poder. No obstante, la
alianza entre derechistas e izquierdistas, el que se conocería como Primer Frente Unido
continuó en el contexto de la Expedición del Norte, una campaña iniciada en 1926 que
buscaba echar del poder al Gobierno de Beiyang y a los señores de la guerra.
En 1927, tras una serie de importantes victorias contra los señores de la guerra del centro
de China, Chiang Kai-shek centra su atención en el Partido Comunista, que ya contaba con
miles de miembros.21 En la que pasaría a la historia como Masacre de Shanghái las
facciones derechistas del KMT atacan a los izquierdistas provocando más de cinco mil
muertes. Si bien muchas figuras importantes dentro del KMT, incluyendo Soong Ching-
ling, la viuda de Sun Yat-sen, criticaron a Chiang por su desmedida violencia, el general
continuó con su campaña anticomunista que no tardaría en convertirse en una guerra civil
en toda regla.

La Guerra Civil

Billete con la efigie de Lenin emitido por la República Soviética de China.

El Partido Comunista de China siguió apoyando al gobierno del Kuomintang, con sede en
Wuhan, pese a las acciones de Chiang en Shanghái. Sin embargo el 15 de julio de 1927, el
gobierno de Wuhan expulsó a todos los comunistas del KMT. El PCCh reaccionó fundando
el Ejército Rojo de Trabajadores y Campesinos de China, el germen del futuro Ejército
Popular de Liberación, para luchar contra el KMT. Un batallón dirigido por el general Zhu
De recibió la orden de tomar la ciudad de Nanchang el 1 de agosto de 1927 en lo que se
conoció como el Levantamiento de Nanchang, considerada la primera batalla de la Guerra
civil china. Un joven Mao Zedong fue nombrado comandante en jefe del Ejército, saltando
a la fama con el Levantamiento de la Cosecha de Otoño en Hunan. No obstante, las tropas
de Mao se ven obligadas a huir al este, donde en 1931 establecen la República Soviética
de China, más conocida como Sóviet de Jiangxi, en torno a la ciudad de Ruijin.

La Guerra de las Planicies Centrales entre facciones del KMT y otros conflictos como la
guerra sino-tibetana o los conflictos fronterizos con la Unión Soviética dan tiempo a Mao.
No obstante, para 1934 las tropas del Ejército Nacional Revolucionario, nombre dado al
ejército del Kuomintang, está listo para atacar Jiangxi. Esto lleva al comienzo de la Larga
Marcha, un éxodo de miles de kilómetros a través del interior de China en dirección a
Shaanxi, el principal núcleo comunista después de Jiangxi. En la Reunión de Zunyi,
celebrada en Guizhou durante la huida, se reconoce a Mao Zedong como líder del partido.
La destrucción de las células urbanas del PCCh llevó al auge de las facciones rurales. El
propio Mao defendía la idea de que el agente revolucionario debía ser el campesinado y
no el proletariado, idea que acabaría por convertirse en el principal pilar del maoísmo.
Igualmente se adoptó una política de centralismo democrático22. Chen Duxiu sería
expulsado del partido y pasaría a liderar el débil movimiento trotskista chino.

La Segunda Guerra Sino-japonesa marcó el final de la primera etapa de la guerra civil


china. Ante la existencia de un enemigo común, Chiang Kai-shek se vio obligado, tras el
Incidente de Xi'an, a colaborar con el Partido Comunista. Las derrotas del Kuomintang en
ciudades como Pekín, Nankín o Wuhan contrastan con los éxitos de los comunistas en el
medio rural, como la Ofensiva de los Cien Regimientos de 1940, al mando del general
Peng Dehuai. Para finales de la guerra los comunistas gozaban de un gran poder en el
norte de China, reforzado tras la invasión soviético-mongola de Manchuria de 1945. Ese
mismo año Mao Zedong recibe el cargo de Presidente del Comité Central del Partido
Comunista de China. Pese a los intentos del general estadounidense George Marshall de
conseguir una tregua entre el KMT y los comunistas, para finales de 1945 la guerra civil se
había reanudado. El Partido gana afiliados a la vez que el Ejército Popular de Liberación
gana reclutas. Mientras el Gobierno de Chiang mantenía el control sobre los principales
núcleos urbanos del país, los comunistas consiguieron hacerse con el control del medio
rural. Para finales de 1948, las ciudades del norte de China se habían convertido en islas
rodeadas de territorio comunista. La táctica de Mao Zedong de controlar el campo había
sido un éxito. A lo largo de 1949, las grandes ciudades fueron cayendo una a una bajo
control comunista, y el Gobierno de Nankín hubo de replegarse hacia el sur, hasta acabar
en la isla de Taiwán. La victoria de los comunistas en el continente chino llevó a la
fundación, el 1 de octubre de 1949 de la nueva República Popular China, bajo la dirección
de Mao y el Partido Comunista.

El Partido bajo Mao Zedong

Véanse también: Reforma agraria china, Ruptura sino-soviética, Gran Salto Adelante y
Revolución cultural.

Los primeros años de la República Popular se caracterizaron por una estrecha


colaboración con la Unión Soviética y por el miedo a un posible ataque por parte de los
estadounidense con el objetivo de reinstaurar a Chiang en el poder, razón por la cual
China intervino en la Guerra de Corea. Eran muchos los que temían que los
estadounidenses y sus aliados no se detendrían en Corea del Norte y que entrarían en
Manchuria. En el ámbito político, en los primeros años de la República popular se mostró
cierta tolerancia hacia los grupos sociales considerados burgueses, si bien cuando el
vicepresidente Liu Shaoqi visitó la Unión Soviética en 1952, Stalin le aconsejó establecer
un sistema unipartidista.23 La Constitución China de 1954 estableció el unipartidismo de
forma oficial.2425 A mediados de la década de 1950 tiene lugar la Campaña de las Cien
Flores, en la que el partido pide a los ciudadanos chinos que expresen críticas al
funcionamiento de la joven república. Sin embargo, a ojos del partido, las críticas acaban
por ser demasiado severas y la campaña es cancelada.

El VIII Congreso Nacional del Partido, celebrado en 1956, fue el primer congreso nacional
tras la victoria en la Guerra Civil, y en él se aprobaron las directrices para los años
siguientes. Sin embargo, la aparente unidad en el seno del Partido comenzaría a entrar en
crisis poco después de este congreso. El Gran Salto Adelante, una ambiciosa campaña que
buscaba modernizar y socializar la agricultura china promovida por Mao en contra de las
opiniones de los asesores soviéticos y de muchos dirigentes comunistas chinos, resultó un
fracaso económico, y enfrentó a Mao a otros dirigentes del Partido, además de provocar
el distanciamiento respecto a la Unión Soviética, algo que ya había comenzado a
mediados de la década de 1950 cuando Mao Zedong criticó duramente la política de
desestalinización de Nikita Kruschev. En el ámbito interior la oposición al Gran Salto
Adelanto llevó a que se pusiese en marcha el Movimiento antiderechista, aprobado por el
politburo en la Conferencia de Lushan de 1959. Fue la primera de las múltiples purgas que
viviría el PCCh durante las décadas de 1950 y 1960.

Tras el fracaso del Gran Salto Adelante, Mao se vio relegado en el aparato del Estado,
cediendo el puesto de presidente de la República Popular China a Liu Shaoqi, y
manteniendo sólo su cargo de presidente del Partido. Desde esta posición, Mao, junto a
su esposa Jiang Qing y al líder del Ejército Lin Biao, pondría en marcha a finales de la
década de 1960 la Revolución Cultural, una campaña que buscaba recuperar la ortodoxia
ideológica del maoísmo, que según Mao y sus aliados se había perdido debido a las
disputas internas dentro del PCCh. Sin embargo, las purgas no se limitarían a los altos
cargos. El Ejército y las Universidades también serían escenario de violencia política ya que
los protagonistas de esta Revolución serían los estudiantes, organizados en grupos de
Guardias rojos quienes incluso llegarían a enfrentarse con el Ejército Popular de
Liberación. Se atacó a todo lo considerado burgués y reaccionario. La Revolución Cultural
tuvo como consecuencia la salida del poder, tanto del Partido como del Estado, de
dirigentes como Liu Shaoqi y Deng Xiaoping. Debido a los enfrentamientos internos
durante estos años, el IX Congreso Nacional del Partido no se celebraría hasta septiembre
de 1969. El IX Congreso marcó la victoria de Mao y Lin Biao en la pugna por el poder. La
jefatura de Estado fue abolida y Mao, en su condición de presidente del Partido, se
convertía de nuevo en el máximo dirigente del país.

Las luchas por el poder continuarían, sin embargo, en los años siguientes. Lin Biao fue
acusado de planear un golpe de Estado contra Mao y acabaría muriendo en un accidente
aéreo cuando intentaba huir del país rumbo a Moscú. La esposa de Mao, Jiang Qing, junto
a sus seguidores, formarían el grupo de dirigentes del Partido que más tarde sería
conocido despectivamente como la Banda de los Cuatro. En el otro lado del Partido se
encontraban los moderados, representados por Zhou Enlai, Primer ministro del Consejo
de Estado de la República Popular China y amigo personal de Mao. Lin Biao, pese a
pertenecer a la facción más radical del maoísmo, sería igualmente criticado durante la
década de 1970. Se popularizó la frase Critique a Lin, Critique a Confucio, que de forma
indirecta se utilizó también para criticar a Zhou. En agosto de 1973, se celebró el X
Congreso Nacional del Partido, que confirmó la línea ideológica de la Revolución Cultural y
confirmaba el poder de Jiang Qing y sus colaboradores.

El Partido tras la muerte de Mao

Tras la muerte de Mao en 1976, el sucesor elegido por este, Hua Guofeng, haría arrestar a
la Banda de los Cuatro, y permitiría el regreso al poder de dirigentes que habían sido
apartados durante la Revolución Cultural. Precisamente el principal de estos dirigentes,
Deng Xiaoping, que gozaba de una base de apoyos mucho mayor que el casi desconocido
Hua, acabaría haciéndose con el poder en el Partido y en el Estado. En 1977, el XI
Congreso Nacional del Partido condenaba los acontecimientos de la Revolución Cultural,
atribuyendo a la Banda de los Cuatro toda la responsabilidad de los errores cometidos.
Esta ruptura con los años precedentes se confirmaría con mayor claridad un año después,
en diciembre de 1978, cuando se celebró la III Sesión Plenaria del XI Congreso Nacional. En
esa reunión, que confirmó la irrupción de Deng Xiaoping como nuevo hombre fuerte del
Partido, se condenó de manera explícita la Revolución Cultural, que fue calificada de
catástrofe y se reiteraron las manifestaciones de condena contra Lin Biao y la Banda de los
Cuatro. La nueva línea oficial del Partido aseguraba que Mao había cometido errores, pero
atribuía la responsabilidad principal de los mismos a sus seguidores, respetando la figura
de Mao como gran líder revolucionario.

A partir del XI Congreso, se inició una etapa de estabilidad política, derivada del firme
control del Partido por Deng Xiaoping, que ha continuado hasta la actualidad. Desde 1978,
los congresos nacionales del partido se han venido celebrando con regularidad cada cinco
años, y las líneas maestras tanto políticas como económicas marcadas por Deng Xiaoping
han sido mantenidas por sus sucesores al frente tanto del Partido como del Estado, Jiang
Zemin y Hu Jintao. La mayor crisis a la que hubo de enfrentarse el Partido Comunista en
estos años fue sin duda la que se derivó de las protestas de la Plaza de Tian'anmen de
1989. El desenlace de estas protestas, en las que murieron cientos de manifestantes tras
la intervención del Ejército, supuso la salida del poder de dirigentes como Zhao Ziyang, y
convirtió a Jiang Zemin en el sucesor de Deng Xiaoping.

El acervo ideológico del Partido, basado en el marxismo-leninismo y el pensamiento de


Mao Zedong, ha sido ampliado en los últimos años con el pensamiento de Deng Xiaoping y
la teoría de la Triple Representatividad de Jiang Zemin. De esta manera, el Partido ha
mantenido la evolución de su ideología, así como el respeto a sus dirigentes, incorporando
a su doctrina las ideas de los líderes más recientes.

Organización

A la cabeza del Partido Comunista se encuentra el Comité Central, formado por alrededor
de 80 miembros elegidos por el Congreso Nacional del Partido Comunista de China, que se
convoca cada cinco años. Un grupo más reducido de miembros de este Comité Central, en
la actualidad 24, constituye el Buró Político, dentro del cual existe a su vez un órgano de
poder más restringido formado por los nueve miembros del Comité Permanente del Buró
Político. A estos nueve miembros del Comité Permanente se les considera habitualmente
los hombres más poderosos del régimen y la mayoría de ellos desempeñan también
funciones de gobierno en el aparato del Estado. Encabezando el Comité Permanente se
encuentra el secretario general. La figura del presidente del Partido, que había ocupado
Mao Zedong, fue abolida en 1982.

El Partido Comunista de China cuenta con dos organizaciones juveniles, el Cuerpo de


Jóvenes Pioneros de China, para niños, y la Liga de la Juventud Comunista de China.

Congresos nacionales

Bandera del Partido, expuesta en la sede donde se celebró el I Congreso en 1921.


El Congreso Nacional del Partido Comunista de China se convoca en la actualidad cada
cinco años, y durante el mismo se elige al Comité Central del partido, además de debatirse
y aprobarse las normas internas del Partido. El XIX Congreso Nacional, celebrado en 2017,
ha sido el último congreso nacional, del que procede el actual Comité Central. El XX
Congreso está previsto para finales de 2021.

Ideología

El Partido Comunista de China es una de las mayores organizaciones políticas del mundo y
en la actualidad cuenta con más de 90 millones de miembros. Tiene presencia en todos los
ámbitos de la vida de la República Popular China, controlando los diferentes niveles de
gobierno, los lugares de trabajo y las instituciones de enseñanza.

En la época de Mao Zedong, la principal diferencia entre el comunismo chino y el de


inspiración soviética que se extendió por Europa y otras partes del mundo radicaba en la
diferente visión de los papeles de la clase campesina y la de los trabajadores urbanos.
Mientras que los comunistas soviéticos desconfiaban del espíritu revolucionario de los
campesinos, viendo a los trabajadores urbanos como la clase capaz de enfrentarse al
poder burgués, Mao vio en los campesinos al auténtico motor de la revolución. Esta visión
del mundo rural como el que debía alzarse contra los poderes establecidos fue la principal
aportación de Mao al pensamiento comunista. Muchos movimientos comunistas, sobre
todo en Asia y América Latina, han tomado esta idea del maoísmo considerando al
campesinado como la clase social que debe rebelarse contra el poder y alcanzar el ideal de
la dictadura del proletariado.

Esta visión ideológica cambió sustancialmente con la subida al poder de Deng Xiaoping,
máximo líder chino prácticamente desde la muerte de Mao en 1976 hasta su fallecimiento
en 1997. Deng impulsó una serie de reformas económicas que supusieron la entrada en
China de inversiones de empresas extranjeras y la creación de empresas privadas dentro
del país. Esta apertura económica de las tres últimas décadas ha alterado la base
ideológica del Partido, que ha ido abandonando las ideas comunistas tradicionales
representadas por el pensamiento de Mao y asumiendo como válido el modelo
económico capitalista. La ideología del Partido ha derivado en este sentido hacia un
modelo autoritario con un fuerte componente nacionalista. Esta deriva ideológica fue
formalizada en la teoría ideológica de la triple representatividad de Jiang Zemin, el sucesor
de Deng en el poder tanto en el Estado chino como en el PCCh, y que ha supuesto la
admisión de empresarios como miembros del Partido en los últimos años. Esta profunda
transformación ideológica ha continuado con los sucesores de Jiang, el actual Secretario
General del PCCh Xi Jinping y su predecesor Hu Jintao, bajo cuyos mandatos se han
intensificado las reformas políticas y económicas.

No obstante, hay bastantes especialistas en el marxismo que opinan que actualmente


China se encuentra en una fase similar a la de la Nueva Política Económica en los primeros
años de la URSS, asentando el capitalismo para, una vez superada esa fase de transición,
poder dar el salto definitivo a un modelo socialista afianzado.

ESTRUCTURA DEL SISTEMA POLÍTICO Forma de Estado: Estado socialista con un sistema
unipartidista representado por el Partido Comunista Chino. Poder Ejecutivo: Formado por el
presidente, el primer ministro, vicepresidentes ejecutivos y el Consejo de Estado. El actual
Presidente es Xi Jinping (desde marzo de 2013 y fue reelegido el 17 de marzo de 2018), y el primer
ministro es Li Keqiang. El presidente y vicepresidentes son elegidos indirectamente por la
Asamblea Popular Nacional por un periodo de cinco años. El cargo de primer ministro es elegido
por el presidente y aprobado por la Asamblea Popular Nacional.

Poder Legislativo: La Asamblea Popular Nacional (se reúne cada año) ejerce el poder de legislación
del Estado, por lo que está encargada de reformar la Constitución y supervisar su implementación;
elaborar y enmendar leyes, y elegir a los dirigentes de los órganos de administración, justicia,
fiscalía y asuntos militares del Estado, y decidir sobre su nombramiento y destitución.
Adicionalmente, está facultada para supervisar la labor del gobierno y examinar y tomar
decisiones sobre los problemas importantes del Estado. Los miembros de la Asamblea ocupan el
cargo cinco años.

Composición actual de la Asamblea Popular Nacional Total 2980 Mujeres 742 (24.90%) Hombres
2238 (75.10%) Total 2980 (100%) 1 de febrero de 2019. Consultado el 19 de marzo de 2020, en:
http://archive.ipu.org/wmn-e/classif.htm Inter-Parliamentary Union. Parline. “China”.
http://archive.ipu.org/parline-e/reports/2065_A.htm Poder Judicial: El Tribunal Popular Supremo
(TPS) es el órgano de juicio supremo del Estado, que responde e informa de su labor ante la
Asamblea Popular Nacional y su Comité Permanente. De acuerdo con la ley, el Tribunal ejerce el
poder de juicio supremo de manera independiente, sin tolerar la intervención de ningún órgano
ejecutivo, organización social o individuo

También podría gustarte