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Sahlins M., Economía de la edad de piedra.

(Chicago, Aldine Publishing Company, 1974)


Traducción al castellano de Emilio Muñiz y Erna Rosa Fondevila. Madrid, Ed. Akal, 1977.
2da edición.

Manuel Sebastian Barrera Lopez.

Economía de la edad de piedra.


El profesor universitario y antropólogo Marshall David Sahlins, graduado en el año de 1951
en la Universidad de michigan, y al año siguiente termino su maestría en Letras. Doctorado
en el año de 1954. Sus trabajos se dedicaron a varios campos de la antropología, tales como
el de la economía, la simbólica, la teoría de la cultura e influencia de los procesos históricos
en la vida social de las colectividades humanas. De 1954 a 1964 el doctor Sahlins, trabajo
en varias obras como autor o editor, entre ellas se encuentran Social Stratification in
Polynesia (1958), Evolution and Culture (1960), Poor Man, Rich Man, Big Man, Chief:
Political Types in Melanesia and Polynesia (1963), y en 1964 realiza un viaje a Nueva
Guinea, que luego de un trabajo de campo de 4 años, saca a la luz unos de sus trabajos más
importantes, Tribesman. La obra que nos concierne aquí, Economía de la edad de piedra,
publicada en el año de 1972, trajo consigo un cambio considerable para la visión de
evolución lineal de la sociedad y la historia. En este libro se ve la fuerte influencia de
economía sustantivista, expresado por Karl Polanyi y toma también de gente como Levi-
Strauss, Hocart y Dumezil, para el trabajo de la antropología histórica, criticando la
economía antropológica basada en el funcionalismo y el materialismo cultural. El problema
central de la obra se funda en la visión de la discusión entre los enfoques de como ver la
economía en las sociedades, que son el funcionalismo y el sustantivismo (Debate que el
autor considera agotado). En forma que el funcionalismo, no puede explicar todos los
hechos de la realidad, que está demostrado, y que es una visión incompleta de los
acontecimientos económicos. El libro se puede considerar un escrito de enfoque
sustantivista, pero más allá de eso, el objetivo que quiere dejar en claro Sahlins, tal cual el
lo escribe en su introducción, que es: “A lo largo de todos los capítulos, el libro tiene un
solo objetivo muy modesto: simplemente perpetuar la posibilidad de una economía
antropológica mediante algunos ejemplos concretos.”1.
El libro cuenta con 6 capítulos principales, los cuales estructuran el libro de una forma algo
divida, en los 3 primeros capítulos, el autor analiza las formas y los patrones de producción
con los cuales estructura su pensamiento. Por ejemplo, el capítulo 1, que tiene como
nombre La sociedad opulenta primitiva, pone en evidencia las tesis sustantivistas,
sosteniéndose en los estudios de diversos autores, demostrando teórica y prácticamente
como en algunas sociedades de cazadores y recolectores mantenían una gran riqueza, como
el caso de los Bosquimanos. También desmiente el hecho que por ser sociedades antiguas o
primitivas estás eran pobres, y que, por este motivo, no contaban con ningún tipo de tiempo
libre o que siquiera alcanzaban sus recursos. Para el segundo capítulo, El modo de
producción doméstico la estructura de la subproducción, se puede denotar como la
economía doméstica o de subproduccion, es una forma de actividad social y cultural, en vez
de una consecuencia netamente de la estructura económica. La economía se basa en un
sistema de recolección, producción y consumo, no hay una manera de intercambio. Sus
recursos son para el consumo, no hay explotación de ellos para el intercambio, no hay
utilización total de sus recursos, no se hace uso de toda la mano de obra para el trabajo, ni
tampoco el uso de medio tecnológicos avanzados para esto. Pero, no implica que vaya en
contra de su vida opulenta, al contrario, sus humildes ideales de satisfacción, es que ellos
no busquen querer explotar estos recursos. El tercer capítulo, titulado como La modalidad
doméstica de la producción: Intensificación de la producción, trata el tema como aspectos
de la vida social afectan a la vida económica, como entidades de unidad doméstica, tales
como el trabajo divido, el matrimonio, la religión y la política transforman e influyen para
la producción. Por este orden social permitía la estabilidad alimenticia, la economía familia
se vuelve una causa social a través del jefe tribal/cacique, este se ve como la
personificación del principio de colectividad, por esto Sahlins dice “La relación económica
dador-receptor es la relación política líder-seguidor”2.

Mientras, para la segunda parte de esta estructura están los últimos 3 capítulos, donde el
antropólogo Sahlins muestra o analiza estos elementos de la producción, son
intercambiados o repartidos a las diferentes esferas de su sociedad o entre comunidades, a
través de distintas estructuras de organización social. En el primer capítulo de esta segunda
parte, o mejor dicho, al cuarto capítulo, El Espíritu del don, un capítulo basado en el
análisis del ensayo de Marcel Mauss, que trata sobre la importancia del sistema de
reciprocidad o en maori el Hau. Donde también Sahlins, entra a profundizar este concepto
de reciprocidad, es vital para la convivencia de las sociedades, como se transforma el regalo
o el compartir, en una realidad política, donde el regalo es un acuerdo material y de
importancia para un acuerdo también de paz. Luego, en el quinto capítulo, se clasifican, o
se denota, las diferencias de reciprocidad que puede haber o hubo en diferentes
comunidades primitivas. Estas diferencias de reciprocidad las clasifica en tres formas
diferentes el autor, en generalizada, equilibrada o negativa. Estas estructuras de las que
habla pueden dar a pie a ver cómo pueden facilitar o dificultar el proceso de intercambio, y
el intercambio es un paso para relacionarse socialmente entre sí. Esto lo explica de mejor
forma en una frase Sahlins, dice “Una relación social determinada puede dificultar cierto
movimiento de bienes, pero una transacción específica puede —del mismo modo— inducir
una relación social particular”3. Para el ultimo capitulo, se trata de dar especificaciones
buscando explicar cómo funcionaban los intercambios entre comunidades o unidades
domésticas, y la distribución de los bienes en las múltiples colectividades. Y esto se veía
divido en dos formas básicas, la reciprocidad era una forma de reparto y contra reparto,
mientras que la repartición era una forma de control del ente mayor entre una sociedad.

Para terminar con esto, en tipo de conclusión, o evaluación valorativa por mi parte, me ha
permitido abrir mi conocimiento a un aspecto de la economía de la cual desconocía, pero
ahora debo tener presente. El conocimiento fuera de un prejuicio de los hechos económicos
de una sociedad que para todos parecía ser pobre, pero realmente eran basados en ideales
económicos de tiempos contemporáneos. Así como también nos permite observar si
nuestros ideales de satisfacción son realmente adecuados en una época de hambrunas,
según nos muestra el autor. El consumismo disparatado que tenemos por parte de nuestra
cultura, replantear el hecho de si esa explotación exagerada, es necesaria. Así mismo, me
muestra hacia dónde va la colectividad en esta economía, si pudiéramos basarnos en
conjuntos que sean recíprocos y como el tener más, no nos convierte en una sociedad más
rica
1 Sahlins M., Economía de la edad de piedra. (Chicago, Aldine Publishing Company,
1974) Traducción al castellano de Emilio Muñiz y Erna Rosa Fondevila. Madrid, Ed. Akal,
1977. 2da edición PP 9

2 Sahlins M., Economía de la edad de piedra. (Chicago, Aldine Publishing Company,


1974) Traducción al castellano de Emilio Muñiz y Erna Rosa Fondevila. Madrid, Ed. Akal,
1977. 2da edición PP 151

3 Sahlins M., Economía de la edad de piedra. (Chicago, Aldine Publishing Company,


1974) Traducción al castellano de Emilio Muñiz y Erna Rosa Fondevila. Madrid, Ed. Akal,
1977. 2da edición 204

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