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BABA, EL SANADOR DIVINO

Dr. D. Dhairyam

Entre los innumerables devotos llegados hasta Bhagavan Baba


de todas partes del mundo y de todas las condiciones, los más
notables y significativos desde un punto de vista mundano son
doctores y psicoterapeutas eminentes, quienes están
familiarizados con el fenómeno del nacimiento, la vida y la
muerte y el funcionamiento del cerebro humano. Cuando
dichos hombres sienten que hay seres que tienen poderes
fuera del alcance de sus ciencias y miran a Bhagavan Baba
como una encarnación de lo Divino, con conocimiento y poder
trascendentales, los escépticos y los agnósticos tienen que
reexaminar sus ideas. Hace más de un cuarto de siglo, un
sobresaliente psicoterapeuta de Madras, el doctor Desiraj
Dhairyam, “sintió el toque sanador de la Divinidad”. Descubrió
por experiencia personal, como muchos otros antes y después
de él, los poderes sobrehumanos de Baba y la misión avatárica
por la cual tuvo lugar su advenimiento.

Los siguientes extractos de un artículo que él escribió en


1975, en ocasión del 50º. Aniversario de Bhagavan Baba.

“EL TOQUE SANADOR”

No tengo talentos especiales para escribir sobre este aspecto


profundo de Bhagavan Baba como divino sanador.

Mi única capacidad es que, como millones más, he sentido el


toque sanador de la Divinidad. Me he vuelto una persona
diferente y deseo compartir mis beneficios, mis experiencias y
mis explicaciones tentativas.

Me encontré con Baba por primera vez en 1960. Había


regresado después de siete años en Estados Unidos,
completamente empapado del racionalismo de la Universidad
de Columbia en Nueva York.

Por otra parte, mi campo de psicoterapia, el estudio científico


y la curación de la mente, tenía poco respeto por el
misticismo, por las contradicciones de la religión y por la
divinidad de un ser supremo.

Había ido al encuentro de Baba en Puthaparti a solicitud de mi


esposa. El primer viaje lo hicimos en una carreta tirada por
bueyes. Llegamos como extranjeros a un lugar extraño. Nos
sentimos peor cuando un voluntario demasiado fervoroso de
aquellos días nos reconvino groseramente por entrar sin
quitarnos los zapatos.

Baba nos mandó decir, sin ningún mensaje previo de nuestra


parte, que esperáramos. Inmediatamente después, un extraño
mortal bajó a darnos la bienvenida con su toque sanador. Él ha
continuado siendo un extraño mortal, pero nos ha quitado lo
desconocido y nos ha hecho miembros de una familia en la
que Él padre y madre y en la que todos los lugares donde ha
estado han sido como un hogar para nosotros. Su toque
sanador ha penetrado nuestras vidas en todos los aspectos de
nuestro ser, física, psicológica, espiritualmente, a partir de
aquel día.

LA ENFERMEDAD Y LA MENTE

Aún en términos humanos, la palabra “sanador” es un símbolo


evocador. En épocas pasadas, en todas las civilizaciones, los
curanderos y los sanadores espirituales fueron uno y el
mismo. Era en su mayor parte, con raras excepciones, mucho
conjuro absurdo. Desde la así llamada época del oscurantismo
el mundo occidental se ha desarrollado y ahora el concepto
universal del médico, el doctor se refiere al hombre que ha
entendido la ciencia del cuerpo y sabe cómo arreglarlo cuando
anda mal. Pero los médicos calificados de hoy conocen la
profunda limitación de su ciencia, saben que el 70 a 80% de
los casos que acuden a especialistas son en su mayoría
psicosomáticos, enfermedades neuróticas u otros males
psicógenos en los cuales en los que la mente juega un rol
importante. Ellos saben que la fe del paciente en el doctor es
de la mayor importancia den todos los casos. Saben que la fe
en sí mismos como doctores es un requisito fundamental para
la mejoría y la cura incluso en la enfermedad estrictamente
física, que la mente sobre la materia tiene relevancia en la
curación.

Ellos saben que la fe sólo puede infundirse por las relaciones


humanas, por su interés sincero en la “persona” total y su
bienestar. Por lo tanto el “buen” doctor de hoy es todavía el
“sanador” de ayer por cuanto que él depende de esta fe del
paciente y de movilizar los recursos psicológicos y espirituales
del paciente para su propia curación. Desafortunadamente,
“las relaciones humanas” son ahora enfatizadas como otra
materia no sólo en la medicina, sino en la administración de
negocios y en otras ciencias y enseñanzas en las diferentes
escuelas de teología y religión.

La bondad humana se ha acartonado hay una terrible sequía


de la peor clase en el mundo de hoy. Especialistas de diversos
campos, líderes religiosos, políticos, todos aprenden a
simpatizar y empatizan con los pobres y los desdichados,
como un arte o una ciencia, pero no como un flujo íntimo
desde el corazón. En este juego de vanidad, todas las naciones
tienen vidas de vacío y falsedad. Estados Unidos ha sido
llamado la tierra de la conformidad, donde la gente es
“manejada por el otro”, como el sociólogo David Reisman ha
dicho. Viven para amoldarse a las esperanzas de riqueza y
felicidad de otros. Nosotros, en la India, hemos perdido
nuestra herencia espiritual en alto grado y estamos
adquiriendo de Occidente su negativo liderazgo infeliz y vacío
de civilización moderna.

CÓMO RESPONDE BABA

Es en este contexto que Bhagavan aparece como el divino


sanador. Aquí me gustaría aludir otra vez a mis experiencias
personales. Las cosas en mi vida personal se movían
lentamente hacia una crisis de vida y muerte en la mayoría de
los aspectos entre los años 1964 y 1968. Él se manifestó a
nosotros como el divino sanador. En aquellos años, Swami
vino a nuestra casa en muchas ocasiones. Nuestras vacaciones
de verano fueron arregladas en lo posible para pasarlas en la
cercanía de Swami. Bhagavan vino a casa cuando teníamos
una junta familiar aun cuando había mucha aversión y mala
voluntad hacía Él en el mismo recinto. El vino porque lo
necesitábamos. Me gustaría escribir sobre uno de los muchos
ejemplos de su ayuda en nuestras enfermedades.

En el verano de 1966, Bhagavan estaba en Ooty, Nos dirigimos


hasta aquel lugar. Esa noche sufrí un ataque de angina con
disnea (dificultad para respirar), sudor, dolor, etcétera.
Llamaron al doctor. A la mañana siguiente, en su residencia,
Bhagavan me llamó repentinamente para que lo condujera en
mi Ambassador, no obstante que Él tenía dos de sus autos
lujosos con choferes a su disposición. Lo llevé hasta Calicut.
Salimos a las 2 p.m. y llegamos a las 5. Salimos de Calicut
cerca de las 10 de la noche en medio de una torrencial lluvia
monzónica. Llevé a Bhagavan de regreso a Ooty y llegamos a
las tres de la mañana.
Yo me sentía bien. Tuve un buen descanso nocturno y fui a ver
a Bhagavan por la mañana. Me solicitó tomarle la
temperatura. Era de 40º C. Nos tranquilizó y dio un discurso.
Dos horas más tarde la temperatura había descendido. Por la
tarde salió para una visita a Ootacamund. Él me había dado de
una manera muy directa salud en mi enfermedad. No fue
porque yo fuera un devoto especial o muy dotado o inclinado
espiritualmente. Todos y cada uno de sus devotos pueden dar
testimonio de la intervención personal de Bhagavan en sus
enfermedades de alguna u otra manera. Este es un aspecto de
su curación divina.

En aquellos años pasábamos por una crisis financiera, legal,


profesional y moral y sin nuestra culpa, lo que habría
acarreado nuestra ruina. En esos años Bhagavan estuvo
personalmente interesado, dio orientaciones minuciosas y
consejos momento a momento, y al final intervino
milagrosamente para sacarnos de la crisis. Esta es otra vez
una experiencia personal que evocará recuerdos en la vida de
los lectores. La divina curación de Bhagavan es notoria.

LA MISIÓN MUNDIAL DE BABA

Bhagavan se ha manifestado en el mundo para perpetuar y


expandir el trabajo de Sri Baba de Shirdi como el divino
sanador. El mundo tiene una gran necesidad de curación en
muchos frentes hoy en día. La inhumanidad del hombre hacia
el hombre es increíblemente mucho más extensa y efectiva
debido al perfeccionamiento de las herramientas de
explotación y destrucción. La explotación económica de
millones de personas mal alimentadas y muriéndose de
hambre es el menor de muchos males. La deliberada
explotación del pensamiento, sentimiento y comportamiento
de la gente, en otras palabras, el amplio lavado de cerebro de
millones en el mundo por unos cuantos ricos en los países
capitalistas, por unos cuantos “teóricos” e “ideólogos” en los
países comunistas y socialistas, ha hecho que la gente olvide
los valores, la moral, la espiritualidad y a Dios.

Bhagavan ve la enfermedad física en el contexto del karma,


renacimiento y salvación espiritual última. Sé de una singular
dama que fue hacia Él como un niña buscando cura para un
mal físico. Bhagavan la miró y dijo que era bueno que lo
tuviera. Ahora, veinticinco años después, ella ve el valor del
consejo de Swami. A algunas personas él las cura de sus
enfermedades corporales. Con otras no lo hace. La curación
corporal es, me parece, siempre el menor aspecto de su
curación; Él toca el corazón y el alma de aquella persona.
Cuando la persona no está “curada corporalmente” aun una
curación ha tenido lugar. En esa persona se aplica la frase “Tu
fe te ha salvado”. Por supuesto esto puede ser un tipo de
casuística de la que con mucha frecuencia hacen uso todos los
pseudo profetas o swamis para ocultar sus propias
deficiencias. Bhagavan es extremadamente reservado sobre
sus curaciones y no curaciones. Para nosotros está en los
miles y cientos de miles de testimonios en términos de la fe
nacida de las experiencias recibidas de Bhagavan. El hombre
ha sido llamado un “animal racional”, un “animal pensante”,
pero estos conceptos han probado ser ilusorios. La única
diferencia que realmente cuenta entre el hombre y los
animales es que el hombre es un animal “conciente de Dios”.
Esta conciencia divina en un individuo lo atrae al verdadero
Dios como al hierro un imán. La enfermedad corporal puede
ser tan sólo la circunstancia que lo pone en la órbita del
campo magnético de Bhagavan.

Bhagavan, el divino sanador, no ha venido a hacer algunas


curaciones físicas aquí y allá. Él ha venido para “tocar” a
millones de todo el mundo. Su misión es mundial. Con
frecuencia ha dicho que primero pondrá su casa en orden
antes de visitar otros países. La India, la tierra de la herencia
espiritual, tiene que tener un renacimiento espiritual antes de
que pueda ser un ejemplo para otros.

EL UNIVERSALISMO DE BABA

¿Cuáles son los atributos únicos de Bhagavan, el divino


sanador del mundo? Su curación es semejante a las capas en
una estructura piramidal. La base es la curación de las
enfermedades físicas, económicas y otras enfermedades
ambientales del individuo. En esa base se produce la curación
mental y emocional.
La cúspide es la sanación espiritual. Él ha venido a motivar a
la gente para trascender casta, creencia y raza en su vida
religiosa. Hay un solo Dios, el dios del amor. Hay un solo
credo, el credo de la humanidad. Hay un solo templo y está
dentro de uno mismo. Las religiones han conducido con
frecuencia a la separación de la gente fuera y dentro del
mismo rebaño. Se niega la superioridad de una religión sobre
otra, la superioridad de una sección de una religión, aunque
sea la clase sacerdotal o de una comunidad sobre otra. Todas
son iguales y tienen igual acceso a Dios. Los rituales, visitas a
templos y diversas observaciones y prácticas son todos
correctos, con tal de que no violen los derechos de otros ni
confieran privilegios y virtudes superiores.

Estos mensajes no son nada nuevo. Muchas sociedades,


versiones modernas de cada religión –la Sociedad Cultural
Ética de Ámerica, la religión Bahai, los cuáqueros, los unitarios
y un sinnúmero de otras– los defienden.

La diferencia se halla en Bhagavan, la encarnación de la


Divinidad. Como él muchas veces dice: “Mi vida es mi
mensaje”. Su vida es su misión. Su vida dejará su toque divino
a través del mundo por un mundo mejor para vivirse y
aspirarse.

BABA Y CRISTO

Nací cristiano, un católico. Como dije, perdí mi religión en


Nueva York en la atmósfera del racionalismo. He sido devoto
de Bhagavan por más de catorce años. Creo que ahora soy un
mejor cristiano, como nunca lo fui. Estoy en contacto cercano
con sacerdotes y religiosos cristianos. Ellos están realmente
perplejos con mi actitud.

- ¿Cómo puedes cambiar tu religión?


- Yo no he cambiado mi religión.
- Pero no crees en Cristo.
- Sí, sí creo.
- Pero sólo en este hombre.
- Cristo y él son uno.
- Pero eso es ridículo. ¿Por qué así?
- Cristo fue una reencarnación. Los judíos se rieron de los
discípulos de Cristo por adorar a un simple hombre y
además loco. Así que en sus días pocos creyeron en él
como Dios.
- Pero Baba es hindú
- Bhagavan no es hindú.

Cristo no era cristiano. Dios no puede ser cristiano o hindú


o mahometano. Baba interpreta los Vedas está revitalizando la
antigua herencia espiritual de la India. Él ha dicho con
frecuencia “Todos los caminos conducen a mí”. Creo que
Bhagavan realiza una transformación en todas las gentes,
aunque sean de diferentes religiones.

“El trabajo es adoración” se ejemplifica con su actividad


constante las veinticuatro horas del día, excepto por unas
cuantas horas de descanso durante la noche. Él se levanta
antes de las 4 a.m. y después de un día ocupado instruye a
jóvenes y viejos por igual, dando orientaciones e instrucciones
muy entrada la noche. Esto lo ha hecho día tras día durante
treinta y cinco años. Ningún mortal puede mantener este
agotador programa.

EL AMOR DE BABA

Dios es amor, Baba cuida de millones en su corazón. Él ha


venido a muchos de ellos en sus sueños. Cada alma a la que él
ve o le habla guarda como un tesoro ese momento, con
lágrimas, por siempre en su vida. Sólo tienen que observarlo
caminar entre miles de devotos que esperan su darshan en
cualquier ciudad, pueblo o aldea en la India. Ves innumerables
caras embelesarse con él, y sabes que es la personificación del
amor.

Dios es la verdad. Bhagavan es Sri Krishna y Él se deleita en


sus lilas. Él parece tan cambiante como el viento pero en
realidad es tan constante así como la corriente continúa fiel su
propósito de alcanzar el océano. Cada profecía que él ha hecho
se ha cumplido. Cada contacto que ha tenido con sus devotos
y otros tiene la marca de sathya, darma, prema.

PUREZA Y ABNEGACIÓN

Su camino no es sencillo. De hecho es el duro camino, honrado


en todos los tiempos, de la pureza, la abnegación, del no
apego a ninguno de los bienes terrenales o relaciones
personales. Baba declara que tenemos que estar siempre
alertas cada minuto de nuestras vidas. De manera concisa
dice: “Aprendan el ABC de la vida: “Siempre ser cuidadoso”.
En Estados Unidos hay una gran prisa por la vida espiritual,
pero la quieren en un paquete sencillo, envuelta bellamente y
lista para trabajar en una instrucción de momento. Muchos
jovenzuelos de Occidente se acercan a él después de un
camino de drogas, vida libertina y gurus que ofrecen, tanto en
la India como en el mundo occidental, caminos fáciles. Ellos se
sienten frustrados cuando no pueden obtener resultados
inmediatos.

El mensaje de Baba es difícil por igual para los hindúes y los


no hindúes, pero el camino se hace fácil con la divina
presencia de Baba. En esto es el divino sanador. Cristo fue un
sanador divino, pero su presencia personal estaba limitada en
tiempo y espacio. Su misión duró tres años y se limitó a
Palestina. Sus seguidores han difundido su mensaje por todas
partes desafortunadamente los resultados no han sido los
esperados. Las naciones cristianas son en su mayoría no
cristianas. Buda mostró el óctuple camino para deshacerse del
dolor y la miseria pero sus seguidores son pocos y su mensaje
está casi perdido. Los Vedas han sido revitalizados desde
tiempos inmemoriales desde Adi Shankaracharya, Madhava,
Ramanuja, Sri RamaKrishna Paramahamsa y Vivekananda,
pero los hindúes de hoy no somos ejemplo del camino védico
de la vida.

Baba el divino sanador, ha venido a conmover personalmente


las vidas de millones por todo el mundo. Él es en realidad la
fuerza de toda la India. Él será pronto una fuerza de todo el
mundo. Estamos próximos a celebrar su quincuagésimo
aniversario. Puede ser que esto marque el comienzo de su
misión para el mundo. Sus caminos son misteriosos y nuestras
mentes están limitadas para comprender su misión. A mi
entender, Bhagavan ha depositado su contacto curativo en
millones de personas en la India a través de su darshan.
Docenas de miles se reúnen a dondequiera que él va cruzando
a todo lo largo y ancho de la India. Ellos se retiran con
sentimiento de temor reverencial y admiración, de
surgimiento de su potencial interior hacia la paz y la
revolución espiritual. Bhagavan está siempre en movimiento y
su contacto es con todas las masas.

UN PROGRAMA MULTIFACÉTICO

Bhagavan tiene un programa multifacético que origina la


resurrección del esclarecimiento espiritual que es la fuente de
su curación divina. Comienza con los bebés, sigue con los
niños, jóvenes y adultos. Su énfasis en la educación y los
centros de servicio, ha dado frutos en todos ellos. Pero en
todo lo que dice y hace está siempre presente el toque del
divino sanador. Estamos perdidos y desvalidos en un mundo
de rápido cambio en avance científico, en conflictos
económicos y políticos, en sensacionalismo y materialismo.
Nuestros esfuerzos insignificantes en el mejoramiento
espiritual están una y otra vez en retroceso por nuestra
debilidad en todo lo que hacemos, y necesitamos en forma
desesperada el contacto del divino sanador.

El divino sanador nos ayuda a cumplir nuestros deberes y


obligaciones en el mundo. Así como un médico familiar
informa sobre problemas de hipertensión o de cualquier
aspecto de la vida del paciente, su dieta, sus hábitos, ejercicio,
reposo, su trabajo, sus relaciones familiares, si ellos son
felices y libres de preocupaciones, etcétera, de manera similar
Bhagavan piensa en una escala inmensamente más profunda,
abarca cada mínimo aspecto de la vida de una persona en una
misión como sanador divino. Acepta el reto de la relación
guru-discípulo, sólo que Él es el divino guru.

El temor y admiración con que los devotos contemplan la


materialización, hecha por Bhagavan, del vibuthi para curar
las enfermedades de los devotos me resultan muy exagerados.
Para el ser divino, estas materializaciones son tanto naturales
como respirar es para nosotros. Además, es una idea
inadecuada creer por un momento que el vibuthi es necesario
a Bhagavan para realizar su milagro. El vibuthi es un símbolo
de la divinidad de Bhagavan. Para muchos en su nivel de
conciencia, el vibuthi tiene poderes curativos.

La curación de Bhagavan está más allá de tiempo, lugar y


espacio. Se han anunciado curaciones en varios lugares de
Estados Unidos y en varios lugares de la India mientras
Bhagavan estaba a cientos o miles de kilómetros de distancia.
Todo lo que él requiere es fe.

MISIÓN QUE ABARCA

En conclusión, Bhagavan como un curador divino hace patente


el principal aspecto de su misión en la tierra. La curación no se
refiere sólo a las pocas curaciones corporales aquí y allá
conocidas por unos cuantos o por muchos. Es una intención
que abarca a todos, en su encarnación. La curación realizada
en cada individuo es de forma divinamente original. Para uno,
él es el médico familiar divino que se encarga de las
enfermedades de la familia; para otro él es un psicoterapeuta
divino por cuanto da consuelo, fuerza y libertad de
preocupaciones y tensión; para otro, él es el educador divino
que propaga la educación dentro y fuera de las instituciones
para el desarrollo de sathya, darma y prema en la vida diaria;
aun para otro, él es un sociólogo que señala las enfermedades
del mundo de hoy y cómo remediarlas; para otro, él es el
divino guru enseñando el crecimiento espiritual, y para otro
más es el divino erudito que viene a interpretar los Vedas y
originar el resurgimiento de la espiritualidad como en los
tiempos védicos; para otro, él es el prema inmaculado o
sathya o darma o cualquiera de las muchas virtudes
esenciales; y hay uno más quien Bhagavan ayuda a ser mejor
cristiano, mahometano, budista o hasta libre pensador. La
lista podría multiplicarse infinitamente. Aun así, cualquiera
que sea el aspecto en el que Bhagavan es importante para una
persona, su contacto es una curación, contacto sanador en el
verdadero, tradicional y real sentido del término.

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